PLÁSTICO: ¿LA CONDENA FINAL PARA GAIA?

Santiago Forero Bareño & Julián Pinilla Espitia.

Marzo 2020.

Universidad Central.
Facultad De Ingeniería.
Expresión y desarrollo del pensamiento
Enrique O. Ferrer Corredor
 La idea del calendario cósmico fue introducida por el astrónomo Carl Sagan, en
ella se escala la existencia del universo con un calendario de 365 días, siendo el Big
Bang el primero de enero a la medianoche exacta, y el día de hoy, el 31 de diciembre a
nanosegundos de las 00:00 horas. Bajo este supuesto, la vida apareció en la tierra
aproximadamente el 2 de octubre con los microorganismos unicelulares más primitivos,
no sería sino hasta el 31 de diciembre a 22:30 que los humanos pisarían la tierra. A las:
23:59.55, El Buda y Jesucristo, nacen. 0.4999 segundos después, el ser humano entró
en la modernidad y junto con esta, en la ciencia de los materiales, la ingeniería
mecánica, eléctrica y electrónica, de la mano con la industrialización 1. Estos últimos
sucesos han marcado un precedente en la historia de la tierra, suponiendo que al
introducir vida a la ecuación, podemos decir que la tierra, como ser vivo autosuficiente
(lo que hoy conocemos bajo la teoría de Gaia) tiene aproximadamente 90 días hasta
hoy a instantes del final del año, y en cuestión de un abrir y cerrar de ojos, experimentó
un crecimiento desordenado de las células “homo Sapiens” las cuales generaron
metástasis a la velocidad de la luz y están llevando la tierra al borde del colapso, nunca
se había visto tan afectado el equilibrio de la vida en el planeta por la presencia de una
especie y sus acciones.

Analizando el problema con perspectiva, es justo creer que, si la especie causante del
problema tiene la capacidad racional y recursiva para combatir y solucionar el
predicamento, tiene la obligación de hacerlo. Como parte del problema e intentando
cumplir con dicha responsabilidad, es necesario abarcar de frente una de las mayores
problemáticas, el plástico: los polímeros derivados del petróleo son particularmente
difíciles de digerir para la tierra, y los actuales “biodegradables”, apenas no son tóxicos
para ella. La mayoría de los implementos plásticos que son parte del problema son de
un solo uso, sin embargo, la madre naturaleza lleva haciendo productos de este tipo
por cientos de años, piensen nada más en un banano, comida rápida por excelencia,
con un empaque no solo biodegradable sino también compostable. Ahora imaginemos
que cada ser vivo está constituido por materiales sumamente diversos con infinitas
aplicaciones, tela de arañas, recipientes de totumo.

Hoy en día la ingeniería de los materiales está abarcando más y más posibilidades de
este tipo y ya contamos con interesantes propuestas como copolimerización con
injertos de poliestireno con almidón de yuca, generando sustitutos del poliestireno
tradicional con propiedades muy similares y una biodegradación casi total 2, si todos los
restaurantes hicieran el cambio a este tipo de alternativas, la huella de carbono se

Druyan, A. & Soter, S. (2014) SIN MIEDO A LA OSCURIDAD. Cosmos: A Spacetime Odyssey Ep. 13.

Pulido, J.; Pineda, M. & Palacios, F. (1997) PLÁSTICOS BIODEGRADABLES OBTENIDOS POR INJERTAMIENTO
DE POLIESTIRENO EN ALMIDÓN DE YUCA (MANIHOT SCULENTA) Revista ION Universidad Industrial De
Santander UIS. Vol. 14 No.1, pp. 53-61
reduciría en al menos un 12%3 y en mayores cantidades si se llega a utilizar en la
industria de carga y transportadora.
El problema no solo radica en desarrollar tecnología y los materiales, si vemos gran
parte del poder en el mundo está influenciado por los industriales, si las industrias
dependen del plástico, este seguirá siendo inherente a la industria de consumo y
menos participante en la del reciclaje y en el bienestar de la sociedad.

En conclusión, los primeros pasos de los materiales reinsertables en el ciclo de la vida,

ya están dados. En efecto, aún es necesario seguir avanzando en las ciencias de su
fabricación y propiedades físico-químicas para dar abasto hoy día; no obstante, sin una
colaboración de los gobiernos para fomentar el desarrollo científico-industrial de este
tipo de tecnología de materiales, es imposible generar un cambio verdadero en el
impacto que estamos generando en el planeta. De la misma manera se deben
implementar herramientas de educación tanto culturales como institucionales, las
cuales permitan un apropiado uso de los recursos y una búsqueda del equilibrio con las
demás especies, ya que, sin una adecuada participación del ser humano, se pone en
riesgo la vida de todos los organismos y de la tierra misma 4. De esa forma nuestra
propuesta no solo implica la experimentación e implementación de sustitutos al
plástico, también en la participación activa para promover estos y durante dicha
transición utilizar lo menos posible elementos contaminantes de un solo uso, llevar
botellas reutilizables para rellenar de agua, por ejemplo, en un futuro quizás esas
botellas pueden estar fabricadas sin benceno, o a base de materiales como la caña de
azúcar. La labor compete a todos los campos del conocimiento y desde el punto de
vista de la ingeniería mecánica, la industrial, ambiental y de materiales, es crucial un
reestructuramiento de la industria para que empiece a ser circular, y en un futuro eco-
sustentable. Modelos similares han tenido mucho éxito en países nórdicos y prometen
ser no solo el cambio positivo ambiental, sino también socio-cultural, empezando a
articular la naturaleza con nuestro modus vivendi occidental.

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Rivard, C. PhD (1991) BIODEGRADABLE PLASTICS: FURTHER RESEARCH NEEDED TO MEET
ENVIRONMENTAL MANDATE. Journal of Environmental Health
Vol. 53, No. 4, pp. 24-26

Capra, F. (1996) LA TRAMA DE LA VIDA: UNA NUEVA PERSPECTIVA DE LOS SISTEMAS VIVOS editorial
Anagrama, Barcelona