Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Desde los años noventa, este concepto ha ido tomando fuerza y evolucionado constantemente,
tras la llegada de la globalización, el aceleramiento de la actividad económica, la conciencia
ecológica y el desarrollo de nuevas tecnologías.
Hay organismos de carácter internacional que se encargan de delimitar, en lo posible, el
concepto teórico de la RSC, cuyas directrices sirven como orientación para las empresas que se
deciden a transitar por este camino. Dentro de los más destacados se podría citar a los
siguientes:
Todo este contexto expuesto, ha favorecido el auge del debate sobre la Responsabilidad Social
Corporativa (RSC), como herramienta que sirva para aminorar el impacto negativo de las
empresas en general y de las multinacionales en particular, sobre los derechos sociales,
laborales, el medio ambiente y, en definitiva, sobre los Derechos Humanos.
La gestión responsable de la empresa implica que esta actúe conciliando (punto de equilibrio)
los intereses del negocio con las expectativas que de ella tiene la comunidad (particularmente
sus grupos de interés o stakeholders).
Las principales responsabilidades éticas de la empresa con los trabajadores y la comunidad son:
Programa Social
Las empresas han comenzado a adoptar la RSC no solo como resultado de presiones de los
consumidores, los proveedores, la comunidad, las organizaciones de activistas, los
inversionistas, etc. (llamados en conjunto stakeholders); sino también como una actividad
estratégica adicional en la competencia comercial.
Las empresas pueden desempeñar un papel muy importante en la vida de las personas, no solo
como proveedoras de empleo y de riqueza, sino como agente de desarrollo en las comunidades
en la que están insertas. Muchas grandes empresas son conscientes de ello y han tratado de
aprovechar las expectativas que genera la RSC para obtener ventajas competitivas (ayudan
ayudándose). La filantropía corporativa ha dejado de ser una actividad autónoma confiada a una
fundación y va formando parte, cada vez más, de las estrategias que contribuyen a realizar el
objeto social de la empresa.
Consecuencias
1) Mejoran la imagen de la empresa y pueden tener un efecto positivo sobre las ventas.
El 70% de los consumidores europeos dice que el compromiso social de las empresas es
importante al comprar.
1 de cada 5 consumidores está dispuesto a pagar más por productos que son socialmente y
medioambientalmente responsables.
2) Las empresas que adoptan criterios de RSE reducen riesgos derivados de comportamientos
socialmente irresponsables (multas, sanciones económicas).
3) El uso de prácticas de RSE indica calidad en la gestión. Normalmente las empresas bien
gestionadas en materia social disfrutan también de una buena gestión en su conjunto.
4) Las políticas de RSE contribuyen a mejorar la reputación de las empresas que las desarrollan.
5) Las empresas que practican la RSE aparecen como más atractivas para los eventuales
empleados (es decir, tienen mayor capacidad para atraer y conservar los recursos humanos más
competentes y cualificados).