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La tradición oral en Colombia se originó con las comunidades indígenas: a través de la lengua dieron a conocer su pensamiento e idiosincrasia por

medio de cuentos, mitos, leyendas y

poemas. Estas manifestaciones facilitan el reconocimiento de los valores de los antepasados, cuyo contenido es importante para los habitantes del país sudamericano.

Debido a que existió primero una literatura oral, se puede considerar que estos relatos fueron fundacionales en el territorio colombiano y su legado aún sigue vigente. Según la región

cambian los personajes y sus peripecias; es decir, en cada zona en particular son más conocidas unas historias que otras.



El Silbón es el personaje principal de una leyenda colombiana. Fuente: BOCOTRUVZLA [CC BY-SA 4.0 (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0)]
Los festivales y carnavales que se celebran en el país fungen como eventos de difusión cultural, puesto que cada disfraz se inspira en los relatos primitivos. Esta es una manera de

mantener la herencia cultural viva, ya que cada año se realizan homenajes a las principales figuras, como la Sayona, el Riviel o el Silbón.

Tradiciones orales de la Orinoquía

Las producciones de este sector revelan una fusión entre lo real y lo sobrenatural. Así mismo, la noche se presenta como un escenario temido en el que se desatan apariciones con

propósitos funestos.

La Sayona

Se trata de una mujer de colmillos colosales con horarios nocturnos cuyo cometido es asustar a los hombres infieles. La tradición señala que transita por el llano como castigo por acabar

con la vida de su esposo debido a los celos.

El Silbón o Silbador

Es un hombre conocido por su aterrador silbido que pone en marcha durante la noche. Algunos dato refieren que se trata de un alma en pena en busca de compañía, mientras que otros

apuntan su principal pecado: matar a su padre. De allí deriva la creencia de que lleva en la espalda un saco con sus huesos.

Tradiciones orales de la zona amazónica

En la región amazónica hay manifestaciones orales con tintes mágicos. Es constante la presencia de dioses, figuras protectoras y criaturas de características mixtas.

El bufeo colorado

Es una criatura parecida al delfín rosado. Al salir del agua atraviesa por una metamorfosis y se convierte en hombre para pretender a las mujeres, raptarlas y llevárselas consigo.
Chullachaqui

Se trata de un diminuto hombre con la misión de proteger los bosques de los intrusos. Dentro de sus características destacan su vestimenta harapienta y sucia, un sombrero de paja y la

piel similar a la de un animal.

Tradiciones orales del territorio Pacífico

Los montes y lugares solitarios son ambientes que suelen generar miedo. Una vez más el telón de fondo oscuro representa la perdición y el desenlance trágico.

La Tunda

Se trata de una mujer de aspecto deplorable cuyo objetivo es capturar a los niños sin bautizar y a los jóvenes para internarse con ellos en el monte y convertirlos en sus amantes.

El Riviel

Es una bestia que navega en una canoa por la noche para asustar a los pecadores, quienes son sus víctimas predilectas y a los que les succiona el cerebro.  Su aspecto se divide en mitad

hombre y mitad animal.

Mitos fundacionales

Mito Chibcha (Bachué)

La historia retrata cómo la laguna de Iguaque hizo brotar flores y plantas coloridas; de allí nació una mujer de larga cabellera negra con su hijo en brazos que tenía el propósito de poblar

la tierra. Ella se casó con el niño cuando este creció y de su unión tuvieron descendencia.
El imperio chibcha creció gracias esto y Bachué les indicó los procedimientos para sobrevivir. Luego regresó con su pareja al agua, los dos convertidos en serpiente. La historia cuenta

que desde las profundidades ella se cerciora de que en el mundo reina el orden.

Mito U’wa (Boyacá)

Cuenta que al principio el universo constaba de dos esferas: la que se ubicaba arriba era cálida y seca, mientras que la de abajo era oscura y húmeda. Por el movimiento del universo

ambos polos se mezclaron y moldearon el mundo intermedio, lugar de los humanos.

Así pues, este mundo depende de las esferas primordiales. Aquí los seres y las cosas son terrenales y tienen todo lo básico para subsistir. Los dioses los proveyeron de movimiento

fusionando el calor del sol con el agua, y de este modo apareció la vida y la muerte en dicho sitio.

Mito Achagua (Meta y Casanare)

Meta y Casanare fueron los lugares en donde nació el mundo de los achagua. Allí una serpiente pretendía exterminar la sociedad de la Orinoquía; por esta razón, los indígenas de esta

comunidad elevaron oraciones por varios días al dios Purú para que los protegiera.

Esta deidad no ignoró las súplicas y por ello le encomendó a su hija la misión de que acabara con la serpiente. Ella cumplió y contempló la forma en que el animal se desmoronaba,

dejando tras de sí gusanos que se convertirían en hombres al tocar la tierra; serían estos quienes custodiarían la zona para que la serpiente no retornara.

Rito
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Para otros usos de este término, véase Rito (desambiguación).

Un rito (del latín ritus penetrus) es un acto religioso o ceremonial, repetido invariablemente en cada comunidad cultural. Los ritos son las celebraciones de los mitos; por tanto, no se pueden entender separadamente de ellos. Tienen un carácter
expresión del contenido de los mitos. La celebración de los ritos (ritual) puede consistir en fiestas y ceremonias, de carácter más o menos solemne, según pautas que establece la tradición o la autoridad religiosa o de la organización
correspondiente también sirve para ritos humanos como sacrificios con animales destinados para tal fin.

Un mito (del griego μῦθος, mythos, «relato», «cuento») es un relato tradicional que se refiere a unos acontecimientos prodigiosos, protagonizados por seres sobrenaturales o extraordinarios, tales como dioses, semidioses, héroes, monstruos o
personajes fantásticos, que buscan dar una explicación a un hecho o un fenómeno.

Los mitos forman parte del sistema de creencias de una cultura o de una comunidad, donde son considerados como historias verdaderas. Al conjunto de los mitos de una cultura se le denomina mitología.

Cultura (del latín cultūra)12 es un término que tiene muchos significados interrelacionados. Por ejemplo, en 1952, Alfred Kroeber y Clyde Kluckhohn recopilaron una lista de 164 definiciones de cultura en Cultura: una reseña crítica de conceptos y
definiciones; y han clasificado más de 250 distintas.3En el uso cotidiano, la palabra cultura se emplea para dos conceptos diferentes:
 Excelencia en el gusto por las bellas artes y las humanidades, también conocida como alta cultura.
 Los conjuntos de saberes, creencias y pautas de conducta de un grupo social, incluyendo los medios materiales que usan sus miembros para comunicarse entre sí y resolver necesidades de todo tipo.

Cuando el término surgió en Europa, entre los siglos XVIII y XIX, se refería a un proceso de cultivación o mejora, como en la agricultura u horticultura. En el siglo XIX, pasó primero a referirse al mejoramiento o refinamiento de lo individual,
especialmente a través de la educación, y luego al logro de las aspiraciones o ideales nacionales. A mediados del siglo XIX, algunos científicos utilizaron el término «cultura» para referirse a la capacidad humana universal. Para
el antipositivista y sociólogo alemán Georg Simmel, la cultura se refería a «la cultivación de los individuos a través de la injerencia de formas externas que han sido objetificadas en el transcurso de la historia». 4

Una leyenda es una narración de hechos sobrenaturales, naturales o una mezcla de ambos que se transmite de generación en generación de forma oral o escrita. Generalmente, el relato se sitúa de forma imprecisa entre el mito y el suceso
verídico, lo que le confiere cierta singularidad.

Se ubica en un tiempo y lugar familiar de los miembros de una comunidad, lo que aporta cierta verosimilitud al relato. En las leyendas que presentan elementos sobrenaturales como milagros, presencia de criaturas feéricas o de ultratumba, etc.Y
estos sucesos se presentan como reales, forman parte de la visión del mundo propia o emic de la comunidad en la que se origina la leyenda.

En su proceso de transmisión a través de la tradición oral, las leyendas experimentan a menudo supresiones, añadidos o modificaciones culturales que dan origen a todo un mundo lleno de variantes. Las más comunes es la "cristalización" de
leyendas paganas o la adaptación a la visión infantil, cuando el cambio de los tiempos ha reducido las antiguas cosmovisiones

EJEMPLOS : RECOPILAN MITOS Y LEYENDAS DE CALDAS.

Una leyenda es una narración de hechos sobrenaturales, naturales o una mezcla de ambos que se transmite de generación en generación de forma oral o escrita. Generalmente, el relato se sitúa de forma imprecisa entre el mito y el suceso
verídico, lo que le confiere cierta singularidad.

Se ubica en un tiempo y lugar familiar de los miembros de una comunidad, lo que aporta cierta verosimilitud al relato. En las leyendas que presentan elementos sobrenaturales como milagros, presencia de criaturas feéricas o de ultratumba, etc.Y
estos sucesos se presentan como reales, forman parte de la visión del mundo propia o emic de la comunidad en la que se origina la leyenda.

En su proceso de transmisión a través de la tradición oral, las leyendas experimentan a menudo supresiones, añadidos o modificaciones culturales que dan origen a todo un mundo lleno de variantes. Las más comunes es la "cristalización" de
leyendas paganas o la adaptación a la visión infantil, cuando el cambio de los tiempos ha reducido las antiguas cosmovisiones.

Las crónicas de Indias


25M A Y 2011 36 comentarios

de Marina Menéndez en Apuntes de clase, Ensayo, Género narrativo, Literatura Argentina, Teoría Literaria Etiquetas:crónicas, historia argentina, Intertextualidad, letras de canciones, literatura argentina, Mujica Láinez
Por Marina Menéndez

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Cuando no recordamos lo que nos pasa,
nos puede suceder la misma cosa.
Son esas mismas cosas que nos marginan,
nos matan la memoria, nos queman las ideas,
nos quitan las palabras.
Lito Nebbia

Los viajes de Colón estuvieron guiados por un interés económico: encontrar una ruta hacia el sur de Asia. Lo que no sabían en aquella época es que existía el océano Pacífico, por eso Colón creyó que estaba en las  Indias Orientales cuando llegó a
nuestro continente. Después de más de dos meses de navegación, Colón y los 87 tripulantes de las tres naves divisaron tierra (tengan en cuenta que la velocidad promedio de navegación era de 160 km por día dependiendo de los vientos y que hay
aproximadamente 6500 km entre Lisboa y las islas Bahamas). El mapa más antiguo que se conserva de esta zona fue obra de Juan de la Cosa, quien acompañó a Colón en varios de sus viajes.

El continente que se llamaría América era un nuevo y desconocido territorio para los europeos, poblado por personas con una fisonomía diferente de la de ellos, que
hablaban lenguas diferentes de las de ellos y que tenían una cultura diferente de las de ellos. Diferente no implica ningún juicio de valor. Lástima que los conquistadores no lo entendieron así… y en vez de respetar las diferencias, intentaron eliminarla.
En esa lucha desigual entre el europeo invasor y el nativo mucho se perdió: vidas, lenguas, cultura.

Muchos de los que llegaron a estas tierras escribieron notas sobre lo que encontraban, sobre lo que iba sucediendo; a esos textos se los llama crónicas de Indias porque relatan hechos en orden cronológico, es decir, en sucesión temporal y porque
ellos creían que habían llegado a las Indias Orientales. Las crónicas son similares a los diarios pero estos son más subjetivos porque el autor/narrador es el protagonista que va relatando los hechos a medida que suceden y registrando las emociones.
Las crónicas estuvieron de moda en la Edad Media y sirvieron de fuente de información para la historiografía, la ciencia que se ocupa de narrar la historia. La mayoría de los cronistas de la época de la conquista y colonización de América eran
europeos y, por tanto, su testimonio no es neutral sino que presenta una visión etnocéntrica. ¿Qué significa esto?  Significa que miraron  los hechos desde la perspectiva europea,
occidental y católica; una perspectiva que consideraba al europeo-blanco-occidental-católico como el centro ( el
ombligo del mundo , diríamos hoy) y al otro cultural y lingüístico como lo diferente, lo raro, lo marginal. El etnocentrismo implica la
creencia en la superioridad y, consecuentemente, el derecho a dominar al otro. Quien asume una postura etnocéntrica no es capaz de ponerse en el lugar del otro .

¿Las crónicas de Indias son textos literarios o textos históricos?


Esta es una pregunta que puede tener varias respuestas aceptables. Para empezar, tendríamos que definir qué es la literatura. Si consideramos que la literatura se define por su caracter ficcional, es decir, por ser un ámbito en el que los conceptos
de real/verdadero  y falso/mentira  no son aplicables porque el autor no tiene una pretensión de verdad, entonces las crónicas no serían literatura ya que los cronistas pretenden dar testimonio de los hechos. Sin embargo, las crónicas de
Indias presentan muchas características que son propias de la literatura como el estilo, que imita al de las novelas de caballería de la Edad Media. Pensemos que los cronistas se deben de haber sentido aventureros descubriendo esta nueva
tierra exótica, siendo participantes de un hecho histórico tan importante como el descubrimiento de un continente… ¿no creen que se habrán sentido como los personajes de las épicas y novelas que leían? ¿No creen que se habrán asombrado y les
habrá parecido fantástico  todo lo que encontraron aquí: animales, plantas, paisajes y costumbres que alimentaron su imaginación? No es raro, entonces, que el estilo de sus crónicas se parezca al de los textos literarios que circulaban en aquella
época. Después de todo, la historia es un largo relato que nos cuentan, que nos creemos y que, a veces, descubrimos que ha sido un cuento del tío. Por suerte, los historiadores se encargan de investigar y de mostrarnos la “verdad”. Nicolás Shumway es
un historiador que nos dice:
El pasado es un caos, repleto de datos, documentos, anécdotas, pareceres, pasiones y cosas olvidadas ahora que serán esenciales más adelante. […] La historia intenta ordenar ese caos. Una parte de la tarea historiográfica consiste en buscar y
verificar datos usando criterios que podrían llamarse científicos. Pero otra parte de esta tarea es hacer una narración; identificar a protagonistas y antagonistas, establecer causas y efectos, asignar motivos, privilegiar algún dato sobre otros,
generalizar, juzgar, nombrar y olvidar.

Fuente: “Hacia el verdadero Mitre: Las ficciones de la historia,” Suplemento de cultura de Página/12. Buenos Aires.  Marzo, 1992, pp. 8-9.

Los textos dialogan entre sí, muchos autores toman textos de otros autores y los incorporan (implícita o explícitamente) en sus propias obras. A ese diálogo, a ese entrecruzamiento de textos le llamamos  intertextualidad. Además, un mismo texto
puede estar construido con varios géneros discursivos, es decir, puede incorporar diversos tipos de textos (poesías, cartas, noticias periodísticas, crónicas, letra de canciones, registros de diálogos cotidianos, entrevistas, ensayos, relatos históricos,
etc.). A esos textos que combinan diversos géneros discursivos les llamamos híbridos.
¿Y entonces? ¿Literatura o historia? Ni una ni otra, quizás. Entre la literatura y la historia hay un  tercer espacio (1), una zona de contacto y superposición en la que los límites son borrosos. En esa zona de confluencia, ni la literatura ni la
historia tienen soberanía absoluta.Las diversas disciplinas (literatura, música, historia, filosofía, física, política, etc.) son parcelas de un amplio territorio que el ser humano divide para poder estudiar (y conocer) mejor pero esas fronteras que establece
el hombre no siempre existen en la realidad.
El primer texto literario de la cultura occidental relata un hecho histórico: la guerra de Troya/Ilión. El gran poema épico español relata la vida de Ruy Díaz de Vivar, el Cid. “El Matadero” de Esteban Echeverría, texto fundante de la narrativa
argentina, oscila entre el relato ficcional y la crítica explícita a la situación política y social de la década de 1830. Facundo  de Sarmiento también se ubica en ese tercer espacio entre la literatura y el ensayo. Algunos textos de Eduardo Galeano nos
regalan espinosas instantáneas sobre la historia latinoamericana. Los textos de Rodolfo Walsh y “Las actas del juicio” de Ricardo Piglia han sido catalogados en el canon de la literatura argentina. El Romance  de Luis de Miranda, primer poema
escrito por un español en el Río de la Plata, el poema La
argentina o La conquista del Río de la Plata  de Martín del Barco Centenera, el cuento “El hambre” de Manuel Mujica Láinez y la novela  El entenado  de Juan José
Saer presentan la recreación literaria de un hecho histórico registrado en las crónicas de Derrotero
y viaje a España y las Indias  de Ulrico Schmidl, en las crónicas de Historia verdadera de la conquista de la Nueva
España  de Bernal Díaz de Castillo, en Historia Argentina del descubrimiento, población y conquista de las provincias del Río de la Plata   de Ruy Díaz de Guzmán, primera crónica del río de La Plata, y en la Carta de
Isabel de Guevara.
Romance  de Luis de Miranda:
Año de mil quinientos
que de veinte se decía
[…]
La ración que allí se dio
de harina y de bizcocho
fueron seis onzas u ocho,
mal pesadas.
Las vïandas más usadas
eran cardos que buscaban
y aun estos no los hallaban
todas veces.
El estiércol y las heces,
que algunos no digerían,
muchos tristes los comían
que era espanto.
Allegó la cosa a tanto
que, como en Jerusalén,
la carne de hombre también
la comieron.
Las cosas que allí se vieron
no se han visto en escritura:
comer la propia asadura de su hermano.
[…]

La Argentina  de M. del Barco Centenera:


Haré con vuestra ayuda este cuaderno
del argentino reino recontando
diversas aventuras y extrañezas,
prodigios, hambre, guerras y extrañezas.
[…]

“El hambre” de Mujica Láinez:


[…] Hoy no queda mendrugo que llevarse a la boca. Todo ha sido arrebatado, arrancado, triturado: las flacas raciones primero, luego la harina podrida, las ratas, las sabandijas inmundas, las botas hervidas cuyo cuero chuparon
desesperadamente.[…]

El hambre le nubla el cerebro y le hace desvariar. Ahora culpa a los jefes de la situación. ¡El hambre!, ¡el hambre!, ¡ay!; ¡clavar los dientes en un trozo de carne! Pero no lo hay… no lo hay… […]

Derrotero  de Schmidl:


[…] La gente no tenía qué comer y se moría de hambre y padecía gran escasez, al extremo que los caballos no podían utilizarse. Fue tal la pena y el desastre del hambre que no bastaron ni ratas ni ratones, víboras ni otras sabandijas; hasta los
zapatos y cueros, todo hubo de ser comido. También ocurrió entonces que un español se comió a su propio hermano que había muerto. […]

LITERATURA PRECOLOMBINA ( CONTEXTO, AUTORES, OBRAS, CARACTERÍSTICAS).

Contexto de la literatura Precolombina


La manera como se conocieron las antiguas civilizaciones fue a través de lo encontrado por los españoles entre estos hechos históricos mencionaré los más relevantes de manera
generalizada sin especificar en cada civilización (Maya, Inca o Azteca).

Dentro del contexto de la Literatura Precolombina tenemos continuación las características algunos datos relevantes:
 Sistema político teocrático o religioso: las clases sociales predominantes lograron un control político sobre las sociedades antiguas gracias al excedente agrícola del maíz y
otros cultivos o granos que les permitió desarrollar otras áreas productivas, culturales y científicas, así como la marcada división social que poseía cada sociedad precolombina
(Maya, Inca o Azteca).
 Las antiguas civilizaciones poseían grandes avances tecnológicos en geología y astronomía, con predicciones de fenómenos naturales hasta nuestros días.
 Se logro reconocer a través de la información encontrada el dominio completo de la poesía épica y lírica, la prosa y el teatro ritual.
 Construcciones de pirámides, ciudades urbanizadas y templos sagrados; practicaban el juego de pelota como un ritual religioso.
 Sus creencias religiosas eran politeístas, como la fuente de identificación religiosa y ritual; así creían que cualquier fenómeno natural: el Sol, la Luna, la lluvia los animales
eran dioses.

Regiones de las civilizaciones Precolombinas 


Las culturas americanas precolombinas más importantes fueron las siguientes:
– Los aztecas: crearon un imperio en el siglo XV (período post-clásico). Fueron encontrados por los españoles. Los aztecas se establecieron en México Tenochtitlan en el centro del
Valle de México, expandiendo su control hacia ciudades-estado ubicadas en los actuales estados de México, Veracruz, Puebla, Oaxaca, Guerrero, la costa de Chiapas, Estado de
Hidalgo, y parte de Guatemala.

– Los maya-quichés: el período clásico fue la etapa de mayor esplendor. Desaparecieron en el siglo VIII d. de C. Los mayas se extendieron sobre un área bastante amplia que
comprende el sureste de México (Yucatán, Campeche, Quintana Roo, y porciones de Chiapas y Tabasco), Belice, el centro y norte de Guatemala y la frontera noroccidental de Honduras
y El Salvador.

– Los incas: período clásico. Asentamiento en las tierras altas de Perú. La civilización Inca floreció en la región andina del subcontinente entre los siglos XV y XVI. Abarcó cerca de dos
millones de km2 entre el océano Pacífico y la selva amazónica, desde las cercanías de Pasto (Colombia) en el norte hasta el río Maule (Chile) por el sur. (Fuente).

OBRAS
POPOL VUH
El "Popol Vuh", "Las antiguas Historias del Quiché", es el libro sagrado de los indios quichés que habitaban en la zona de Guatemala.
Se explicaba en él el origen del mundo y de los indios mayas. También se relataba la historia de todos los soberanos.
Se puede señalar que hay allí una conjunción de religión, mitología, historia, costumbres y leyendas. Es esencialmente una descripción del conjunto de tradiciones mayas de quienes habitaban la región
guatemalteca; pero también aparecen agregadas algunas ideas cristianas, lo que hace suponer que el autor conocía a misioneros católicos. No se conoce el nombre del autor pero por datos sacados del
contenido de la obra, se supone que ha sido escrito hacia 1544.
Fue escrito originalmente en piel de venado, posteriormente trascripto en 1542 al latín por Fray Alonso del Portillo de Noreña.
La versión española fue realizada sobre este último texto en el siglo XVIII (1701) por el fraile dominico Francisco Ximénez que se había establecido en Santo Tomás Chichicastenango. Y "Popol Vuh" lo
llamó un estudioso de temas americanistas, que en el siglo XIX lo tradujo al francés, Charles Etienne Brasseur de Bourbourg.

El significado de los términos que conforman el nombre es:

Popol: Palabra maya que significa reunión, comunidad, casa común, junta.

Vuh: Libro, papel, árbol de cuya corteza se hacía el papel.


Para los Quichés de Guatemala, hombres del bosque o de los magueyes, el Popol Vuh es una Biblia.

En el libro se distinguen tres partes:

La primera es una descripción de la creación del mundo y del origen del hombre, que después de varios fracasos fue hecho de maíz, el alimento que constituía la base de su alimentación.

La segunda parte trata de las aventuras de los jóvenes semidioses Hunahpú e Ixbalanqué que termina con el castigo de los malvados, y de sus padres sacrificados por los genios del mal en su reino
sombrío de Xibalbay.
La tercera parte es una historia detallada referida al origen de los pueblos indígenas de Guatemala, sus emigraciones, su distribución en el territorio, sus guerras y el predominio de la raza quiché sobre las
otras hasta poco antes de la conquista española. Describe también la historia de los Reyes y la historia de conquistas de otros pueblos.
 
Yurupary
La Leyenda de Yurupary se nos presenta como el ejemplo más típico de formalización literaria en Colombia. Es una leyenda que ha andado por mucho tiempo de
boca en boca por las tribus y las malocas; en los caminos más oscuros de la selva amazónica. Su origen es común a todas las tribusde la Amazonía colombo-
brasilera (río Vaupés, Isana y río Negro), principalmente en la región del Vaupés-Colombia.
La Leyenda de Yurupary es prueba de que nuestra cultura autóctona está aún presente y viva, pues su culto se practica en numerosas tribus constituyéndose hoy
día en el gran mito, todavía vigente de los indígenas colombianos y por extensión, latinoamericanos; además, es el único texto indígena de autor conocido.
Extraña la falta de interés que hasta la fecha ha existido por estudiar la leyenda de Yurupary desde un punto de vista literario, lo cual no ocurre con otros textos
amerindios como el notable Popol-Vuh de los quichés de Guatemala. En realidad, las explicaciones que se intentan a este respecto no parecen satisfactorias,
aunque hay que tener en cuenta que el estudio de la mitología indígena es un campo relativamente poco explorado y que las investigaciones sobre literaturas
amerindias están en su etapa preliminar .
Este mito fue recogido a finales del siglo XIX por el indígena brasilero Maximiano José Roberto, descendiente de indígenas manaos y tirianas, quien lo plasmó por
escrito en lengua franca o Nheengatú (derivada del tupí-guaraní); posteriormente fue traducido al italiano por el Conde Ermanno Stradelli y publicado en 1891 en el
Bolletino de la societa geographica de Roma. (Serie III, Vol III, p.p. 659-689; 789-835).
Pese a esta publicación, el mito siguió prácticamente ignorado no sólo por los colombianos, sino también por los brasileros; hasta que en la década del cincuenta,
Don Pastor Restrepo Lince lo redescubrió; y con la asistencia de Américo Carnicelli, lo tradujo del italiano al español. Javier Arango Ferrer tuvo conocimiento de este
hecho y fue el primero en divulgar públicamente en su ensayo Raíz y desarrollo de la literatura colombiana la existencia de este documento. En la actualidad, Héctor
Orjuela con la colaboración de Susana N. Salessi y el Instituto Caro y Cuervo, han publicado una nueva traducción del manuscrito de Stradelli al español

Bernal Díaz Del Castillo


Conquistador y cronista español (Medina del Campo, Valladolid, h. 1492 - Guatemala, h. 1585). Desde joven se decidió por la carrera de las armas y debido a su afán de aventuras,
hacia 1514 se embarcó a América viajando sucesivamente con las expediciones de Pedro Arias de Ávila (a Darién, o sea Centroamérica), Francisco Hernández de Córdoba (a Yucatán)
y Juan de Grijalva (a Tabasco). Casado con Angelina Díaz, tuvo un hijo llamado Diego.

Por tres años estuvo al servicio de Diego Velázquez en Cuba hasta que se le incluyó en la expedición de Hernán Cortés. Desde el 18 de febrero de 1519 fue soldado de las huestes de
Pedro de Alvarado, por lo que participó en la conquista del imperio mexica. Fue testigo presencial de la prisión y muerte de los tlahtoanis Moctezuma y Cuitláhuac, vivió la llamada
«Noche Triste» y peleó por la toma de México-Tenochtitlán.

Inca Garcilaso de la Vega

(Garcilaso de la Vega, llamado El Inca; Cuzco, actual Perú, 1539 - Córdoba, España, 1616) Escritor e historiador peruano. Era hijo del conquistador español Sebastián Garcilaso de la
Vega y de la princesa incaica Isabel Chimpo Ocllo. Gracias a la privilegiada posición de su padre, que perteneció a la facción de Francisco Pizarro hasta que se pasó al bando del virrey
La Gasca, el Inca Garcilaso de la Vega recibió en Cuzco una esmerada educación al lado de los hijos de Francisco y Gonzalo Pizarro, mestizos e ilegítimos como él.
A los veintiún años se trasladó a España, donde siguió la carrera militar. Con el grado de capitán, participó en la represión de los moriscos de Granada, y más tarde combatió también en
Italia, donde conoció al filósofo neoplatónico León Hebreo.
En 1590, muy probablemente dolido por la poca consideración en que se le tenía en el ejército por su condición de mestizo, dejó las armas y entró en religión. Frecuentó los círculos
humanísticos de Sevilla, Montilla y Córdoba y se volcó en el estudio de la historia y en la lectura de los poetas clásicos y renacentistas. Fruto de esas lecturas fue la traducción del
italiano que el Inca Garcilaso hizo de los Diálogos de amor, de León Hebreo, que dio a conocer en Madrid el mismo año de su retiro.

Fray Toribio de Benavente


Toribio Paredes nació en la villa de Benavente, de la provincia de Zamora, España. Al profesar como fraile franciscano adoptó el nombre de fray Toribio de Benavente. Ingresó en la
orden franciscana en la provincia de Santiago, pasando después a la de San Gabriel de Extremadura y, de éste lugar se embarcó a la Nueva España, en compañía de fray Martín de
Valencia, siendo el sexto de los doce primeros franciscanos en llegar, por el puerto de Veracruz en 1524, a las tierras americanas recién conquistadas. Murió en la ciudad de México, el
10 de agosto de 1568; se le dio sepultura en el convento de San Francisco. 
 
El objetivo pregonado de las misiones religiosas españolas a las nuevas posesiones de la corona era el evangelizar a los indios, en la práctica facilitó su dominación y la obtención de
una fuerza de trabajo que generó riqueza a muy bajo costo. Al igual que todos los miembros de las órdenes mendicantes españolas hicieron el trayecto de Veracruz a la capital
caminando descalzos, o con ligerísimas sandalias por lo que su cuerpo y vestiduras sufrieron mucho. Al pasar por Tlaxcalla los indios, al verlos, decían Motolinia!", palabra nahuatl que
significa "pobre", de allí el mote que escogió para su vida.  

Características de la Literatura Precolombina

 En los textos se encuentran relatos filosóficos sobre la existencia humana, la lucha por el poder del conocimiento, la sabiduría para alcanzar la plena civilización. En los
escritos se puede evidenciar la religiosidad de cada civilización y su manera de vivir.
 La poesía manifiesta el sentimiento de dolor y el sufrimiento ante el sentido fatalista de la vida. Sus temas predominantes son la muerte y el sufrimiento de poeta y del
pueblo expresado a través de la poesía.
 Empleo del realismo mágico: hechos inverosímiles donde se mezcla lo real con lo irreal. El término Realismo Mágico  se emplea por la hiperbolización del relato, de como
se concibe el mito sobre la creación. Cabe aclarar que el Realismo Mágico se establece como corriente literaria a partir del siglo XX.
 Narraciones mitológicas y cotidianas de carácter hiperbólico: que significa que son exageradas.

Géneros literarios de la Literatura Precolombina 
Poesía  Épica
Esta narra las grandes hazañas de los dioses y héroes de sus culturas, un ejemplo de ello es el Popol Vuh, que narra relatos cosmogónicos, teogónicos de la cultura maya; la creación
del hombre y pueblos antiguos.

Escrito en lengua quiché (hacia el año 1500) y traducido al castellano por el fraile dominico Francisco Ximénez, quien se apropió del texto original en Santo Tomás, Chichicastenango
(Guatemala); es considerado la Biblia de los Mayas-quichés.
Poesía 
La poesía, como la de Netzhualcóyotl (1402-1472) rey de Texcoco, esta llena de temas fatalistas o existencialistas. En general, la poesía Precolombina posee un fuerte sentido religioso
de comunicación colectiva entre los hombres y sus divinidades.

Teatro
El teatro de la América Precolombina era de carácter ceremonial, muchas de esas muestras no presentaban las características del teatro clásico conocido hasta ese entonces.

Encontramos las siguientes obras: El Rabinal Achí, Chilam Balam, entre otras. El drama Ollantay ya se considera con influencia europea por incorporación de sus características, este
refleja las tradiciones culturales y literarias de los de la mitología inca.

Fragmento del  Popol Vuh 
Esta es la relación de cómo todo estaba en suspenso, todo en calma, en silencio; todo inmóvil, callado, y vacía la extensión del cielo. Esta es la primera relación, el primer discurso.

No había todavía un hombre, ni un animal, pájaros, peces, cangrejos, árboles, piedras, cuevas, barrancas, hierbas ni bosques: sólo el cielo existía.
No se manifestaba la faz de la tierra.

Sólo estaban el mar en calma y el cielo en toda su extensión. No había nada que estuviera en pie; sólo el agua en reposo, el mar apacible, solo y tranquilo. No había nada dotado
de existencia (…).

Entonces se manifestó con claridad, mientras meditaban, que cuando amaneciera debía aparecer el hombre. Entonces dispusieron la creación y
crecimiento de los árboles y los bejucos y el nacimiento de la vida y la creación del hombre.

Se dispuso así en las tinieblas y en la noche por el Corazón del Cielo, que se llama Huracán. (…)

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