Borges Antiguas literaturas Germánicas: La volsunga saga
Diez cantos de a Edda mayor, con forma de monólogos y diálogo,
configuran una larga y trágica historia, que abarca regiones y muchas generaciones. Gunnar, Sigurd, Brynhild, Fafnir y Gudrun. Nació a orillas del Rin, pero la versión más antigua es la incluida en la Edda. A mediados del SXIII, un escritor noruego redactó, inspirado en estos, a Volsunga Saga. En el primer capítulo y en el último, un hombre de barba gris, embozado y con el sombrero sobre los ojos: Odín, que abre y cierra al historia, ajeno a las vicisitudes mortales. Es una de las máximas epopeyas de la literatura. Los resúmenes inevitables en un trabajo didáctico, la falsean, indebidamente, acentuando su índole primitiva. A obra, sin embargo, es menos bárbara que el argumento, impuesto al autor por la tradición. La primera impresión que parece dejar es la de un caos de crueldades. En realidad, los temas eran familiares a la época, ajustando personas al mito. Los hechos pueden ser falsos, pero los personajes reales. Dos poetas del SXIX se inspiran en la Volsunga. William Morris, 1876, Sigurd the Volsung, y Richard Wagner, en la famosa tetralogía Der Ring des Nibelungen.
El cantar de los Nibelungos
La trágica historia del tesoro de Andvari perdura en dos versiones
famosas. A Volsunga Saga, Noruega, mitad del SXIII, y el Nibelungenlied, Cantar de los Nibelungos, en Austria, a principios del mismo siglo. El poema Alemán, si bien anterior en el tiempo, corresponde a una etapa posterior en la evolución de la fábula. El ámbito de la Volsunga es mítico y bárbaro; el del Nibelungenlied, cortesano y romántico. (Resumen del cantar) Treintinueve cantos, cuatro versos largos en cada estrofa, con rimas pareadas y, a veces, rima interior. Se cree que el aautor fue un juglar austríaco. Dos ciudades imaginarias parecen tomadas del Parzival de Wolfram Von Eschenbach. La primera mitad es inferior a la parte correlativa (La capa Tarknappe, invención desafortunada, etc). En la segunda, dominada por la figura tiránica de Hagen, que encarna la lealtad germánica, que no era incompatible con el crimen y la traición, con el engaño y el perjuro, o porque los antiguos germanos no concebían la lealtad como una ley abstracta y universal le ética, sino más bien como una relación legal y personal. Le es leal a su señor, y no espera un destino piadoso, porque los dioses son tan duros como los hombres. Gudrun, en la antigua, venga la muerte de los hermanos. Kriemhild, la del marido. En aquella, el antiguo vínculo pagano de la sangre es más fuerte; en ésta, el vinculo cristiano del matrimonio. El juglar del cantar suprimió o atenuó lo maravilloso, ayudando a construir el paisaje que a del cuento de hadas a la novela.