TEMA:

Ensayo de Rut

PROGRAMA DE VERANO – USELADIS

ARTÍCULO:
La Ofrenda de Noé

ESTUDIANTE:
Joel Omar Reyna Silvestre

CURSO:
Libro de Génesis

PROFESOR:
Lic. Luis Cornejo

FEBRERO - 2 0 2 0
 INTRODUCCIÓN:

Luego del acontecimiento Catastrófico más Significativo de la Historia de la Humanidad que

representó el Juicio de Dios sobre la malvada generación antigua que sucumbió baja las aguas
del Diluvio, Dios preservando un remanente fiel de humanos y también salvaguardando a los
animales, “se acordó de Noé”, haciendo reducir las aguas del juicio y zarpando el arca en el
monte Ararat. Pronto como el Gran Patriarca descendiera del Arca junto a su familia y los
animales nos cuenta la Historia Bíblica que “Edificó Noé un altar a Jehová” donde ofreció
holocausto y que este acto fue aceptado por Dios como “olor grato”, en seguida el Autor nos
menciona que Dios prometió no volver “a maldecir la tierra por causa del hombre”.
Finalmente Jehová bendice al remanente fiel casi de la misma manera como lo hizo con la
primera generación ordenándoles que fructifiquen, se multipliquen y llenen la tierra, da
instrucciones claras contra quien “derramare sangre de hombre”, y establece su pacto con la
creación prometiendo que ya no volverá a exterminar “más toda carne con las aguas del
Diluvio” poniendo al Arco Iris como señal de este pacto.

Pero cabe la pregunta ¿Qué significó dicha ofrenda y sacrificio? ¿Era de carácter de Acción de
Gracias, propiciatorio o Expiatorio? Respondiendo esta pregunta podremos extraer algunos
principios del Culto Patriarcal para la aplicación dentro del Culto Cristiano Contemporáneo.

GLOSARIO:

CULTO: El servicio Litúrgico o de Adoración que rinde a Dios.

PROPICIACIÓN: Es el acto mediante el cual se apacigua o se elimina la ira de Dios o se obtiene

su favor. Generalmente a través de una ofrenda.

EXPIACIÓN: Expiación (heb. kippurîm, literalmente, “cubiertas” [de los verbos kâfar, “cubrir”,
“hacer expiación”, “reconciliar”; y kipper, “cubrir pecados”]; kappêr, “sustitución”; gr.
katallague, “reconciliación”)  El término griego refleja la idea fundamental de restablecer la
armonía en una relación, de modo que cuando hubo una separación ésta pueda ser eliminada
por el proceso de cubrir el problema, producir la reconciliación

LA OFRENDA DE NOÉ EJEMPLO DE ADORACIÓN.

(Gn.8:15-22)

15 
Entonces habló Dios a Noé, diciendo: 16  Sal del arca tú, y tu mujer, y tus hijos, y las mujeres de
tus hijos contigo.17  Todos los animales que están contigo de toda carne, de aves y de bestias y
de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, sacarás contigo; y vayan por la tierra, y
fructifiquen y multiplíquense sobre la tierra.
18 
Entonces salió Noé, y sus hijos, su mujer, y las mujeres de sus hijos con él. 19  Todos los
animales, y todo reptil y toda ave, todo lo que se mueve sobre la tierra según sus especies,
salieron del arca.20  Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave
limpia, y ofreció holocausto en el altar. 21  Y percibió Jehová olor grato; y dijo Jehová en su
corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del hombre; porque el intento del
corazón del hombre es malo desde su juventud; ni volveré más a destruir todo ser viviente,
como he hecho.22  Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el
calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.
Noé esperó la voz de Dios para descender del Arca después de haber permanecido 370 días
dentro de él junto a su familia y los animales preservados. No sabemos qué panorama
encontró luego de descomunal desastre, es posible que el paisaje se encontraba desolado y no
había mucha vegetación, sin embargo lo primero que realizó Noé no fue impactarse por los
estragos del diluvio sino edificar “un altar a Jehová”, este dato es importante, se trataba del
primer Altar construido, es un lugar de Sacrificio donde se presentaba una ofrenda encendida
a Jehová, Von Rad menciona “La primera obra humana que la tierra liberada y devuelta al
hombre puede contemplar, es un altar para Dios, El Señor” (El Libro de Génesis: 1977). En
seguida Noé “tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia” seguramente de entre los
animales y aves que conservó en siete parejas (Gn. 7:2-3); “y ofreció holocausto en su lugar”
esta es la primera vez también que aparece en la Biblia la palabra Holocausto que Trenchard
define como “olah o alah, cuyo significado literal es lo que asciende, la víctima de este
sacrificio era quemada totalmente y el humo ascendía hacia lo alto” (El Génesis: 1993
Trenchard y Gonzales) se trataba de un sacrificio encendido. Primero nos preguntamos ¿Cómo
es que Noé aprendió este tipo de Sacrificio Encendido? El antecedente de este hecho fue la
Ofrenda de Abel A Jehová quien “miró con Agrado a Abel y su Ofrenda” en este relato “Abel
trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas” es evidente que ha
realizado un sacrificio para presentarlo delante de Jehová (He. 11.4) aunque no se hace
referencia a que sea encendida. El énfasis entonces está en la actitud del corazón de Abel que
conllevó a la presentación de una ofrenda adecuada, esto es: un sacrificio; sin embargo el
antecedente inicial nos deriva hacia el Edén luego de la Caída de Adán y Eva Dios los expulsó
de su jardín pero justo antes de su salida Dios los vistió de pieles (Gn 3.21); Indudablemente
se había realizado el primer sacrificio para vestir la vergüenza del hombre ocasionado por el
pecado, esto podría hacer entender que se trató de un sacrificio expiatorio inicial que sin duda
los patriarcas pudieron conocer.

Por lo versículos que continúan podemos ver la importancia de esta ofrenda a Jehová que
ofreció Noé en holocausto sobre el altar primigenio, nos relata el autor que “percibió Jehová
olor grato; y dijo Jehová en su corazón: No volveré más a maldecir la tierra por causa del
hombre;… ni volveré más a destruir todo ser viviente”, nos encontramos con un
antropomorfismo de Dios quien recibe la fragancia del sacrificio encendido, y la acepta como
olor grato, luego dice, aparentemente conmovido, que no volverá a maldecir ni destruir la
tierra y los seres vivos que habitan en ella, esto nos lleva a formularnos una segunda pregunta:
¿Qué propósito tenía la Ofrenda de Noé? Según Von Rad la expresión olor grato debería
traducirse como “perfume de apaciguamiento” contribuyendo así al debate teológico y
considerar la ofrenda como propiciatorio. Dice Archobold: “Aquí se afirma que YHWH percibió
el aroma del sacrificio de Noé y, en respuesta, expresa arrepentimiento como consecuencia del
efecto del aroma sobre sus sentidos. Seguidamente, decreta algunas bendiciones en favor de
la humanidad ya que, de no ser por el aroma del sacrificio, habría obrado de otra manera.” (El
aroma en la Adoración Hebrea: Revista Cuestiones Teológicas Colombia.)

La ofrenda propiciatoria era común en el Antiguo cercano Oriente así lo confirma el

Diccionario Teológico de El pentateuco de Desmont Alexander “El sacrificio ofrecido después
del diluvio en la Epopeya de Gilgamesh y en la versión sumeria más antigua del diluvio
presenta libaciones y ofrendas de grano , así como sacrificios de carne para presentar un festín
para los dioses. EL propósito general de los sacrificios en el mundo antiguo era el de aplacar la
ira de los dioses con regalos de comida y bebida y probablemente esa era la intención del
héroe del diluvio en los relatos mesopotámicos.” Algunos teólogos asumen que el culto
hebreo adoptó las prácticas religiosas de estas culturas Orientales.

Una comprensión clara del Contexto Literario nos ayudará a definir si es que la ofrenda en
Realidad fue propiciatoria o tiene otra naturaleza. Este evento se suscitó inmediatamente
después del diluvio, en ese sentido la ofrenda y el desastre universal están íntimamente
ligados ya que fue lo primero que hizo Noé antes que Jehová le diera otras indicaciones y
estableciera luego su Pacto con él (Gen. 9:1-17), la iniciativa fue exclusivamente de Noé y no
una instrucción dada por Jehová, ¿qué lo motivó a hacerlo? lamentablemente Noé se
mantiene en silencio, como lo ha estado durante toda esta historia, sobre el propósito del
holocausto; pero el escritor nos menciona dos cosas importantes a tener en cuenta: Primero
Gn. 6.18 menciona la promesa de Salvaguardar a Noé de las aguas y establecer su Pacto con él,
y en Hebreos 11.7 señala que “con temor preparó el arca en que su casa se salvase”,
indudablemente existe este reconocimiento de la acción salvífica de Dios para con él y su
familia, Noé estaba realizando una ofrenda de Gratitud a Dios por la Salvación recibida.

En segundo lugar Génesis 6:5-6 menciona “Vio Jehová que la maldad de los hombres era
mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos de su corazón sólo era de
continuo al mal; y se arrepintió Jehová de haber hecho al hombre en la tierra, y le dolió en su
corazón” el juicio de Jehová fue ocasionado por el aumento del pecado, Noé fue testigo del
exterminio de la Generación antidiluviana; entonces podría tratarse también de una ofrenda
de reconciliación, considerando la maldad generalizada de los humanos que perecieron. Sin
duda la historia del diluvio tiene connotaciones de Pecado, Juicio y Salvación. Entendiendo
esto se podría alegar que esta ofrenda también tenía propósitos de expiación, Noé estaba
dolido por los pecados que ocasionaron el juicio y en parte se identificó con ellos; esta
perspectiva entra en consonancia con el altar y el sacrificio ya que, como sustenté
anteriormente, El inicio de los sacrificios fue en el edén y con énfasis en la expiación del
hombre, que seguramente Noé debía saber ya que fueron él y sus hijos quienes tenían la
responsabilidad de enseñarlo a las futuras generaciones.

La idea de propiciación se debe a que algunos teólogos interpretan las prácticas religiosas
patriarcales a la luz de los ritos del Antiguo Cercano Oriente, en especial Mesopotamia,
quienes sí realizaban ofrendas para aplacar la ira de los dioses, pero la expresión “Y percibió
Jehová olor grato…” no debiera entenderse como la razón por la cual Dios apacigua su ira
porque se razonaría que Dios actúa bajo la iniciativa del hombre. El relato bíblico refiere que
fue Dios quién tomó la iniciativa en la reconstrucción de su creación, y Él estaba ya
anticipándose a la reconciliación del mundo, en Gen 8.1 leemos “Y se acordó Dios de Noé…”
este antropomorfismo revela por un lado que Dios inició sus actos salvíficos sin esperar
contraprestación del hombre y por otro lado resalta la fe paciente y obediente de Noé. La
reorganización de la tierra devastada comenzó como un acto soberano de Dios. La palabra
hebrea rúakj, se utiliza aquí como verbo, y se traduce oler, respirar, percibir, y tiene la idea de
esperar por anticipado, disfrutar. En la Biblia los términos antropomórficos describen a Jehová
en términos humanos. Así por ejemplo el rostro de Jehová denota su presencia (Sal. 4,6), los
ojos de Jehová indican su conciencia acerca de algo (Sal. 11,4), su oído significa que está atento
a la peticiones de sus fieles (Sal. 17,1), el olfato revela su presencia o su aceptación. Cuando
Jehová acepta una ofrenda, la inhala, la respira; de no ser así, rechaza la ofrenda, no la
respiraría. Este concepto es claro Lv 26.27-31 donde se utiliza el mismo verbo y Jehová les dice
a sus fieles claramente que por su desobediencia a sus preceptos no olería sus suaves aromas.
El acto de oler o percibir el aroma de un sacrificio encendido significa aceptación de la misma
por parte de Dios.

¿Por qué la Ofrenda de Noé fue acepta delante de Jehová? EL relato Bíblico no nos dice
exactamente, pero la fuente interna encontrada en la Biblia nos sugieren algunas
competencias; En primer lugar fue debido a que los propósitos de Noé al ofrecer el Sacrificio
encendido estuvieron dentro de la voluntad de Dios, tanto la gratitud por la salvación recibida
como la expiación para la reconciliación con Dios exteriorizados mediante el holocausto
gozaban de la aceptación grata de Dios.

En segundo lugar, se puede apreciar que la presencia del altar sirvió para tener un lugar de
sacrificio adecuado y que el sacrificio de un animal limpio acompañado del fuego que
consumió todo la ofrenda fueron originales hasta ese momento y un paradigma para las
futuras generaciones, lo vemos presente en las prácticas patriarcales hasta que vino la
ordenanza levítica que se organizó en un sistema de sacrificios. Ese sistema como esta Ofrenda
fueron anticipos del Sacrificio Expiatorio Concluyente de Nuestro Señor Jesucristo en la Cruz
del Calvario.

Pero la más contundente razón por qué Dios aceptó la ofrenda no fue por los propósitos ni por
las formas en primera instancia sino por Noé mismo, se podría decir que la Vida del adorador
era de Olor Grato a Jehová, esto entra en perfecta consecuencia con la ofrenda de Abel ya que
“Jehová miró con agrado a Abel y su ofrenda”. ¿Pero cómo era la vida de Noé? Podemos
encontrar varias cualidades, primero Gn 6.9 menciona que era “varón justo”, esto es justo en
carácter o conducta; a continuación resalta que “era perfecto en sus generaciones” podría ser
cercano a la primera cualidad, es decir, fiel y honrado, íntegro. Además encontramos una
referencia reveladora “con Dios Caminó Noé”, de inmediato nos trasladamos a la bella
narración de Enoc a quién Dios se lo llevó porque Caminó con él; es gratificante ver que ambos
llevaron una vida de la mano de Dios, consecuentes con sus principios y creencias, además Noé
representó una excepción entre el sistema de valores presente en ese tiempo, era realmente
Contracultura en su contexto, luz entre las tinieblas, el aposto Pedro además de su justicia
resalta que era “Pregonero de justicia”, su vida predicó de su Fe en Dios, asimismo era
anunciador del juicio venidero de Dios y de la salvación provista por él. Luego podemos notar
en Gn 6.22 y 7.5 que Noé “hizo conforme a todo lo que Dios le mandó”, fue la obediencia a
Dios su mejor ofrenda, fue una obediencia paciente y con esperanza, le llevó mucho tiempo
preparar el arca y tuvo que obedecer aunque la razón le decía que nunca había llovido y en su
tiempo se desconocían estas naves; también tuvo paciencia dentro del arca esperando 370
días y aunque esa espera parecía interminable quiso aguardar a que la voz de Dios le dé las
instrucciones para salir; tiempo después el Profeta Samuel mencionó “He aquí, el obedecer es
mejor que un sacrificio, y el prestar atención, que la grosura de los carneros”(2 Sam 15.22).
Finalmente el escritor de Hebreos resalta la Fe de Noé, (He. 11.7) esa fe paciente y
esperanzadora, que le hizo construir el Arca y levantar su altar, menciona además que “llegó a
ser heredero de la Justicia que es por la fe”; así tenemos que Noé Fue Justo, predico la Justicia
y alcanzó la Justicia por la Fe. Sin lugar a dudas todas estas cualidades de Ser Justo, íntegro,
piadoso, obediente y lleno de Fe, definen la vida de Noé quién antes del diluvio “Halló Gracia
ante los ojos de Jehová” y luego del mismo su vida y su ofrenda fueron aceptados en olor grato
a Jehová.
 CONCLUSIONES:

1. La Ofrenda de Noé es la segunda que se narra en la historia bíblica, después de Abel,

trae 3 cosas nuevas para ese tiempo, la edificación de un Altar que era en lugar de
sacrificio, el ofrecimiento de un de un holocausto de tipo encendido el cual consistía
que la víctima tenía que ser quemada y de esta manera elevada mediante el humo y
por último se relata por primera vez que esta ofrenda fue de olor grato a Jehová.
2. Aunque agrega elementos y características nuevas, Noé tenía nociones de cómo
ofrecer una ofrenda, primero en la ofrenda de Abel que Dios miró con agrado, no hubo
altar pero se ofreció un sacrificio (Heb 11.4); y también sabía cómo Dios, después de la
Caída, vistió de pieles a Adán y Eva para cubrir la desnudez símbolo de su pecado, en
este caso Dios sacrificó un animal, fue un acto expiatorio por sobre todo.
3. Algunos Teólogos entienden que el sacrificio de Noé tuvo naturaleza propiciatoria por
lo que declara Gen. 8.21, esto debido a la influencia que habría recibido los patriarcas
de los ritos especialmente Mesopotámicos y Sumerios, pero las características de las
ofrendas patriarcales tienen clara distinción en cuanto al carácter expiatorio, los
lugares de sacrificio y la iniciativa de Dios.
4. El Carácter de la Ofrenda de Noé no tiene enfatiza la propiciación, estuvo íntimamente
relacionado con el Diluvio, y fueron los motivos la expiación por la maldad que trajo
como consecuencia el juicio y la Gratitud a Dios por haber salvado a él y su Familia.
5. La contención de ira de Dios no fue por percibir el olor grato sino que esto ya se estaba
dando desde antes porque su propósito salvífico era de su iniciativa, y la
reconstrucción del mundo devastado fue un acto soberano de Dios. El
Antropomorfismo de que Jehova respiró connota la aceptación de Dios de Noé y su
ofrenda.
6. Dios aceptó esta Ofrenda principalmente por la Vida Justa, íntegra, piadosa, obediente
y llena de fe de Noé, quien por ello tuvo los propósitos correctos de expiación y
Gratitud y esto le llevó a presentar un Sacrificio encendido, todo esto fue de Olor
Grato a Dios.