Estudiantes: Juan José Llorente, Lucas Cacciuttolo.
Ramo: Filosofía del Derecho 2.
Examen final. En el presente trabajo se arribará la cuestión sobre a la que se refiere MacCormick, a raíz del texto “Instituciones del Derecho” donde afirma que su teoría institucional del derecho es una postpositivista si no antipositivista. Luego, conectado con lo anterior, se realizará una CRITICA O DEFENSA respecto de ello. Para comenzar debemos tener en claro que el autor del texto nos señala que él ve al derecho como un orden normativo institucional. Nos deja ver esto, ya que uno de los dilemas o debates que han ocurrido en la filosofía del derecho es establecer lo que realmente es el derecho, un concepto o, por lo menos, una aproximación a ello. Así es que históricamente podemos encontrar principalmente dos corrientes que han intentado dar una respuesta definitiva que pareciera conveniente examinar, a grosso modo, para el fin de este trabajo. Estas son el iusnaturalismo y el iuspositivismo jurídico. La primera corriente se basa en que existiría un derecho natural, en el cual derecho y moral confluirían en un derecho que no sería creación del hombre. En lo tocante a este trabajo lo fundamental de ello es que hay una conexión necesaria entre derecho y moral. En cambio, en la segunda corriente (dejando de lado sus posturas extremas), habría una separación entre derecho y moral. En el texto, MacCormick encasilla a su teoría institucional del derecho como una que es postpositivista, no encuadrándola en las corrientes anteriormente citadas. Esto porque que parte de la base de que es posible diferenciar derecho y moral, puesto que se dice que lo que caracteriza a la moral es un orden autónomo, en cambio el derecho sería heterónomo, donde el derecho vendría a ser impuesto por otro sujeto. Esta diferenciación no obsta a que la moral pueda servir de límite para saber qué entendemos por derecho, donde lo que es en extremo injusto no puede ser considerado como derecho, pero no es lo mismo cuando hablamos de meras injusticias (muy parecido a lo establecido por Radbruch). Este límite para que hablemos de derecho viene dado por la extrema injusticia. Actualmente el límite, según la “guía” que establece el texto, son los derechos fundamentales. Así, para quien escribió el libro, habría una distinción conceptual entre derecho y moral. A lo largo del texto nos establece varias cuestiones que nos pueden servir como criterios para diferenciar a ambos órdenes, pero el principal es la autonomía o heteronomía de ellos. En cuanto a la moral, establece que es un orden completamente autónomo, en cambio el derecho vendría a ser heterónomo o, al menos, lo es relativamente. Este es el criterio diferenciador clave para distinguir y decir que uno y otro son cosas distintas, pero siempre teniendo en cuenta lo dicho más arriba, esto es que la moral puede servir de límite respecto de lo que consideramos como derecho. Sumado a esto, uno de los aspectos relevantes de la moral es que es “controvertida”, es decir que no todas las deducciones a las que lleguen los individuos serán exactamente iguales entre ellos, sino que, por lo general, diferirán. Conectado con ello, es que MacCormick explica que los individuos actúan como usuarios de normas, los que actúan conforme a creencias recíprocas de que están haciendo lo correcto y, así con ello, logran establecer relaciones interpersonales de confianza y pueden guiar su actuar dentro de una comunidad de personas. Luego, en relación a ambos puntos explicados anteriormente, es que dicho autor nos explicita en su texto que cada individuo tiene razones propias para obedecer el derecho y que cada uno de ellos guía su actuar en base a expectativas recíprocas respecto de lo que uno cree y los demás creen que es correcto. Luego, a raíz de ello, encontramos a las convicciones morales personales y las expectativas comunes relacionadas con el derecho y sus destinatarios. Sumado a lo anterior, todo esto le da una importancia y lo vincula con una idea de justicia, idea la cual es de suma relevancia para ciertas ramas del derecho, como lo es el derecho penal, donde tanto las penas como los criterios para establecerlas deben tener siempre en consideración la finalidad de justicia que con ellas se persigue. Respecto a la idea de justicia, y conectándolo con lo dicho en varios párrafos más arriba, es que podemos calificar al pensamiento de MacCormick como muy similar a lo dicho por Radbruch en su momento, ya que ambos autores compartirían que lo que es justo serviría como un límite para determinar lo que es o no es derecho. Luego, derecho y moral son órdenes distintos, pero donde la moral sirve para reputar un sistema jurídico en particular, estableciendo estándares para lo que es derecho. Así podemos decir que su concepto de derecho y moral y sus características que las relacionan permiten encasillar al pensamiento de MacCormick como postpositivista e incluso como un antipositivista, ya que, como se ha dicho hasta ahora, si reconoce al derecho y la moral como cuestiones que son distintas, le da una elevada importancia a la moral en su teoría, importancia que es dejada de lado e incluso controvertida y negada por autores positivistas.