Guía práctica de

componentes en una
instalación de gas
natural
Índice
Guía práctica de componentes
en una instalación de gas natural

1. Introducción 3

2. Las instalaciones de gas natural 4

3. Clasificación de las instalaciones según el tipo y presión de suministro 6

4. Componentes de una instalación de gas 7

4.1.Llave de paso general 7

4.2. Generador o caldera 8

     4.3. Ramal Interior o Distribuidor 9

     4.4. Contadores 9

5. Instalación de radiadores: aspectos a tener en cuenta 11

6. Tuberías: tipos y características 12

7. Seguridad y mantenimiento de las instalaciones de gas 16

2
1. Introducción

España cuenta con una implantación masiva del gas natural como combustible para
todo tipo de viviendas y edificios. El usuario tiene acceso directo y sencillo a un re-
curso que utiliza una amplia red de instalaciones y centros de distribución desde su
puntos de origen, como gaseoductos y centros de gasificación, hasta su lugar de des-
tino. Las instalaciones de gas de los hogares, pero también en el comercio y en la
industria, forman parte del día a día de millones de personas porque proporcionan un
recurso de coste contenido, alta eficiencia y seguridad en el abastecimiento. Esto,
sumado a que es un combustible que no requiere instalaciones de ningún tipo para
almacenarlo y a su baja contaminación en comparación con otros recursos, lo con-
vierte en muy práctico.

Por gas natural se conoce a una mezcla de hidrocarburos gaseosos compuesta en

una proporción del 80-90% por metano, proveniente de yacimientos subterráneos
presentes en la naturaleza, en ocasiones solo y en otras junto a petróleo. La compo-
sición volumétrica del gas natural tiene variaciones según sea su procedencia, y los
valores de metano, etano, hidrocarburos superiores y nitrógeno varían.

Los profesionales acreditados por las administraciones como tales son los especia-
listas que están autorizados para llevar a cabo instalaciones de gas natural y opera-
ciones de revisión y reparación, así como mantenimientos periódicos. A continuación
vamos a conocer en detalle los componentes de toda instalación de gas natural.

3
2. Las instalaciones
de gas natural

En las instalaciones de gas natural de las viviendas, el suministro de gas se dis-

tribuye a través de la Instalación Receptora Individual (IRI). Ésta también conec-
ta la vivienda al suministro de butano o propano, en cada caso. Las instalaciones
domésticas de gas natural llevan el gas desde la red a los puntos de consumo, y
la principal característica de la Instalación Receptora Interior es su estanqueidad.

2.1. Tipos de instalaciones de gas.

En función de si es para un piso o para una vivienda unifamiliar, la Instalación Re-
ceptora Individual tiene sus particularidades:

2.1.1. Instalación de gas natural en una vivienda

plurifamiliares o colectivas.
Este tipo de instalaciones en un piso requieren, en primer lugar, de una Instala-
ción Receptora Común (IRC), que debe recorrer todo el edificio y conectarse con
la acometida de gas, y en segundo lugar de una Instalación Receptora Individual
en cada uno de los domicilios. Si la IRC ya existe, se efectúa la instalación de for-
ma individual. De acuerdo con la Ley, si la IRC no se ha llevado nunca a cabo en el
edificio, al menos un 33% de los propietarios de los inmuebles debe aprobar la
instalación.

Para realizar la IRI en una vivienda, debe establecerse un tendido de tuberías

que recorre el piso. Por ellas se trasladará el gas hasta los distintos lugares que
estén previamente definidos. La instalación, a su vez, se une a la IRC. A esto hay
que sumar la instalación de una llave de paso que sirva para abrir y para cerrar la
canalización. Por otra parte, se instala el contador de gas individual, siempre en
el exterior de la vivienda. A partir de ahí, el técnico de la empresa distribuidora
de gas será el encargado de aprobar la instalación y dar de alta el suministro.

4
2.1.2. Instalación de gas natural en una vivienda unifamiliar
Las viviendas unifamiliares, solo requieren de una Instalación Receptora Indivi-
dual. Este montaje deberá recorrer las tomas para la conexión de aparatos de
gas. Es imprescindible efectuar una acometida y cumplir con una serie de trá-
mites para ello, lo que incluye la solicitud de permisos a las autoridades locales
para efectuar la obra.

Para canalizar el conducto general del gas se procede a intervenir en la vía públi-
ca y a cortar el gas para garantizar la seguridad de los operarios y de la propia
instalación. Una vez concluida la intervención, se debe restablecer tanto el pavi-
mento como el equipamiento público para dejarlo como se encontraba con ante-
rioridad. Después de realizar la acometida, se debe comenzar con la Instalación
Receptora Individual, que comenzará en el lugar en el que termine la acometida,
en los límites de la propiedad. El punto de conexión será el elegido para colocar
un armario protegido, con el contador de gas en su interior.

2.2. Presión de utilización del gas natural

La presión de utilización del gas natural es de 22 milibares, no obstante, a ni-
vel práctico la presión mínima la determina el aparato que va a conectarse en
el punto terminal. La UNE 60670 define este tipo de presiones. La forma en la
que afecta la presión en el suministro de gas natural es la siguiente; cuando es
elevada, aumenta el consumo de gas natural, ya que los quemadores trabajan
con más potencia. Además, pueden producirse deterioros en los aparatos. Lo
habitual es que un exceso de presión en la red sea controlado por el limitador de
presión, que cortará el suministro en caso de superar valores muy elevados. Por
otro lado, si la presión es insuficiente, puede darse el caso de que las calderas no
lleguen a arrancar o que la potencia suministrada por los quemadores no sea la
suficiente.

El cambio de presión en cada tramo se realiza mediante un regulador de presión.

Las válvulas son las mismas para todos los tramos, y los aparatos domésticos, como
cocinas, calentadores o calderas domésticas, trabajan siempre a baja presión.

5
3. Clasificación de
las instalaciones
según el tipo y presión
del suministro

Los tramos de las instalaciones receptoras están clasificados en función de la pre-

sión que se disponga en los mismos. La clasificación de los tramos de instalación por
presiones es la siguiente:

ƒƒ Alta presión. Superior a 4 bar efectivos (o relativos).

ƒƒ Media presión B. Comprendida entre 0,4 y 4 bar efectivos (o relativos).

ƒƒ Media presión A. Comprendida entre 0,05 y 0,4 bar efectivos (o relativos).

ƒƒ Baja presión. Inferior o igual a 0,05 bar efectivos (o relativos).

Las instalaciones alimentadas en alta presión son principalmente instalaciones in-

dustriales, normalmente de gran capacidad. Las unidades normalmente utilizadas
para cada escalón de presión son las siguientes:

ƒƒ Tramos en media presión B. Se utiliza el bar y el kilogramo por centímetro cua-

drado (kg/cm2).

ƒƒ Tramos en media presión A. Se utiliza principalmente el bar o el milibar (mbar),

pero también suele utilizarse el kilogramo por centímetro cuadrado (kg/cm2),
y el milímetro

ƒƒ de columna de agua (mm cda).

ƒƒ Tramos en baja presión. Se utiliza principalmente el milibar (mbar), aunque

también se utiliza el milímetro de columna de agua (mm cda).

6
4. Componentes de
una instalación de gas
Una instalación receptora de gas es el conjunto de tuberías, accesorios y equipos
que distribuyen el gas combustible desde la válvula de acometida hasta las distintas
válvulas de conexión a los aparatos domésticos. A continuación describimos las prin-
cipales características de sus componentes.

4.1. Llave de paso general

La llave de paso general es la que se utiliza para cortar el paso de gas al edificio,
en contraposición a la llave de paso individual, que se instala antes de la entrada
a un local o vivienda y tiene la utilidad de detener el suministro a esa vivienda en
concreto.

La empresa suministradora, de acuerdo con la propiedad, es la encargada de de-

cidir el emplazamiento y accesibilidad de la llave de acometida, considerando
que debe situarse enterrada próxima al límite de propiedad o en el interior de
un armario de regulación en el mismo muro límite de la propiedad. La llave del
edificio es obligatoria cuando exista un tramo enterrado de más de 10 m o con
trazado visto o visitable de longitud superior a 25 m desde la llave de acometida.
También, cuando se produzca la situación excepcional de que la instalación re-
ceptora alimente a más de un edificio. Esta llave irá situada lo más cerca posible
del muro de cerramiento del edificio.

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Mediante las válvulas de gas se puede detener, regular o iniciar el paso de gases
mediante una pieza movible que cierra, obstruye o abre el conducto de paso de
gas. En cuanto a las distintas llaves que se emplean en las instalaciones indivi-
duales receptoras, son del siguiente tipo:

ƒƒ Llave macho-macho. Con conexiones por junta plana. Ambas se utilizan prin-
cipalmente como válvulas de edificio, montante colectivo, válvula de abona-
do o llaves intermedias de la instalación.

ƒƒ Llave de contador recta macho-tuerca-loca. Con conexiones por junta pla-

na.

ƒƒ Llave de contador en escuadra macho-tuerca-loca. Con conexiones por junta

plana. Ambas son llaves utilizadas únicamente para la conexión de contadores.

ƒƒ Llave macho-macho. Con pata y conexiones por junta plana. Utilizada princi-
palmente como la llave de conexión entre la tubería y el aparato de gas.

4.2. Generador o caldera

El generador o caldera es un dispositivo en el que se realiza la combustión del
gas para distintos fines dentro de la vivienda. Mediante la quema del gas, el agua
de la caldera se transforma en vapor, lo que administrar calentar tanto al siste-
ma de calefacción de la vivienda como al agua que tiene un uso sanitario. Los
generadores más extendidos para su uso en viviendas son los mixtos, aunque
también pueden verse generadores instantáneos, conocidos también como de
microacumulación. (consistente en un pequeño depósito que facilita el que sal-
ga agua caliente más rápidamente cunado salga caliente)

Existen varios tipos de generadores de gas; las calderas gas estancas (en ellas
la combustión tiene lugar en una cámara estanca), las calderas gas de bajo NOx
(no emiten gases contaminantes para el medio ambiente), las atmosféricas (que
usan el aire del lugar donde se encuentran para la combustión) y las de conden-
sación (que reutilizan el calor y ofrecen un elevado rendimiento energético). Las
calderas con acumuladores, que se suelen emplear en viviendas de más de tres
baños, hacen que el agua salga caliente en cuanto se abre la llave del grifo por-
que cuentan con depósitos de entre 3 y 5 litros de agua caliente.

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 Aunque en apariencia pueden resultar similares, a diferencia de las calderas de
gasóleo, las de gas cuentan con un sistema de regulación de seguridad en los
quemadores, lo que asegura la regulación adecuada y una correcta combustión.
Debido a la peligrosidad del gas, las calderas de este tipo son capaces de detec-
tar fugas y pérdidas de presión, de manera que se impide el riesgo de salidas
de combustible que podrían generar daños materiales en forma de incendios
o explosiones, así como graves problemas para el cuerpo humano, entre ellos
la asfixia. Además del ahorro económico el gas proporciona un mantenimiento
más sencillo, no requiere de deposito y es una energía más limpia.
           

4.3. Ramal interior o distribuidor

El distribuidor o ramal interior es una conducción lleva el gas desde la llave de
paso general hasta el montante general, que a su vez es la tubería general que
reparte el gas a todas las viviendas, o a los montantes individuales. Éstos últi-
mos se ubican en una sala baja específica, llamada cuarto general de contado-
res, desde donde se envía el gas a cada vivienda.
           

4.4. Contadores
Gracias a estos elementos se mide y calcula, de manera precisa, cuál es el consu-
mo en el que ha incurrido un cliente en su domicilio. Esta instalación se produce
cuando se concede la solicitud del alta en el servicio de gas. El consumidor pue-
de, con el contador, saber hasta dónde llega el consumo y a cuánto ascenderá la
factura por el servicio. Por otra parte, la empresa que comercializa el servicio
utiliza esta medición para estimar el precio, en función del gasto en el que haya
incurrido el usuario. Por último, la distribuidora determina el peaje de acceso
que corresponda en función del consumo anual que se haya efectuado.

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Existen distintos tipos de contadores domésticos de gas, aunque uno de los
usados con más asiduidad es el contador normalizado modelo ‘G4’, que a su vez
puede ser el BK-G4 V1,2 A160, el BK-G4 V1,2 A160 ALZ4 o el BK-G6 V2 A250. Los
dos primeros tienen un caudal mínimo (m3/h) de 0,04 y un caudal máximo (m3/h)
de 6, mientras que el último tiene entre 0,06 y 10. La fabricación de los contado-
res de gas se produce conforme a norma, aunque los más habituales son los de
membranas, conocidos también como de paredes deformables. Las normas a
las que deben atenerse los contadores son las siguientes:

ƒƒ Para paredes deformables, normas: UNE 1359 y 60510.

ƒƒ Para los de turbina normas: UNE 12261 22.

ƒƒ Para los de turbina normas: UNE 12261.

ƒƒ Para pistones rotativos norma: UNE 12480.

ƒƒ Para doméstico de ultrasonidos: UNE 14236.

ƒƒ En el caso de contadores de turbina y pistones es necesario que dispongan

de un doble emisor de impulsos.

En cuanto a la distancia a la que debe realizarse la instalación del contador de

gas, la normativa UNE 60670 parte 5 señala que el dispositivo se debe colocar
a la menor distancia posible del lugar por donde penetra la tubería de la casa,
sin incluir aseos, baños o dormitorios. El mecanismo nunca debe colocarse a una
distancia inferior a los 20 centímetros de otros elementos que sirvan para gene-
rar calor, agua caliente sanitaria o electricidad, así como tampoco encima de los
fuegos de una cocina, con la excepción de que exista una pantalla de protección
o que la instalación se produzca a una distancia de al menos 40 cm. Es obligato-
rio que exista ventilación constante, ya sea directa o indirecta, con un patio de
ventilación o con el exterior, cuando la instalación se produce en el interior de un
local en lugar de en el interior de una vivienda.

10
5. Instalación de
Radiadores: aspectos
a tener en cuenta
Estos emisores de calor cuentan con diversos módulos, en función del espacio que
están destinados a calentar (a mayor espacio, más módulos). Cuentan con una entra-
da con una llave de corte y una de salida, en el que se coloca un detentor para regular
el flujo de agua y equilibrar la instalación manteniendo un poder calorífico constante
en cada radiador. De esta forma se logra obtener un nivel de calor parecido en toda
la vivienda.

Mediante una válvula con termostato se puede regular la temperatura que propor-
ciona un radiador, aunque existen también llaves termostáticas de calefacción con
las que se puede establecer la temperatura deseada previamente. La emisión de ca-
lor de las calderas suele regularse con un termostato de ambiente, aunque existen
modelos de más modernos de termostato que incorporan funciones electrónicas,
por lo que se pueden programar. De esta manera se activa el paso del agua según la
hora y temperatura que se desee.

11
6. Tuberías: tipos y
características
En función del tipo de circuito de tuberías a instalar dentro de la vivienda, podemos
diferenciar entre calefacción monotubo y la calefacción bitubo.

Calefacción monotubo
En esta clase de instalación de gas, un único tubo lleva la entrada de agua y el retorno.
El agua caliente sale de la caldera y se desplaza hasta cada radiador de uno en uno.
Entre las ventajas de las instalaciones monotubo está el menor coste de instalación
que acarrea y la baja probabilidad de que se produzcan fugas y roturas. Sin embargo,
puede presentar dificultad para obtener una temperatura homogénea en toda la ins-
talación, por lo que se aconseja recurrir a válvulas termostáticas y detentores. Es un
tipo de instalación adecuada para viviendas pequeñas, con poca distancia entre los
radiadores para minimizar la pérdida de calor.

Calefacción bitubo
Con este sistema, el agua caliente se traslada, gracias a un tubo, por todos los radia-
dores, y regresa a través de otra conducción, dispuesta de forma paralela, a menor
temperatura. Los radiadores se calientan de forma conjunta, evitando desajustes y
proporcionando una sensación térmica equilibrada en toda la casa. Tiene un riesgo
un poco superior a la calefacción monotubo de roturas y fugas y es más costosa de
instalar, porque tiene más metros de conducción.

En función de lugar de colocación, las tuberías pueden ser vistas (inmovilizadas con
elementos de sujeción adecuados), empotradas en paredes o muros (muros no resis-
tentes, sin huecos), alojadas en vainas o conductos ventilados, o enterradas (no se
permite por suelos de viviendas o locales). Las conducciones pueden estar en zonas
comunitarias, en el interior de las viviendas si las alimentan o en el interior de locales
destinados a usos colectivos o comerciales, si los alimentan. Si no es así, tienen que
estar colocadas en conductos para conducir posibles fugas y para ejercer protección
mecánica.

En cuanto a los materiales de las tuberías, en el ámbito doméstico se suelen dar de

cobre y de multicapa, aunque también es posible encontrar conducciones fabricadas
en acero.

12
Tuberías de cobre
Las conducciones de cobre deben estar compuestas por cobre desoxidado con
fósforo con alto contenido en fósforo residual, denominado C-1130 según la nor-
ma UNE 37.141 y con un espesor mínimo de 1 mm. Las características mecánicas,
así como las medidas y tolerancias, son las que se determinan en la citada norma
UNE 37.141, y han de suministrarse en barra (estado duro), no permitiéndose el
empleo de tubo en estado recocido (o blando) suministrado en rollo.

Las tuberías de cobre tienen como ventaja una elevada seguridad y fiabilidad.
Las uniones con soldadura hacen que las conducciones de cobre sean muy her-
méticas y, por tanto, resulten idóneas para el transporte de gas.

Además es un material muy seguro, porque es resistente al fuego y no emite

gases tóxicos. Tampoco se ve afectado por la corrosión. Precisamente por esta
resistencia, y también porque se trata de un material impermeable, que evita el
paso tanto de los rayos ultravioleta del sol como del oxígeno, es especialmente
apreciado para montajes exteriores. Conserva sus propiedades fisicoquímicas
a lo largo del tiempo a pesar de su proximidad a los agentes químicos del suelo o
del contacto con materiales empleados con asiduidad en la construcción, como
escayola, cemento y yeso.

13
Cuando es necesario realizar la instalación de gas en un espacio reducido, una
de las características que hace del cobre un material utilizado es la flexibilidad.
Es elástico y resistente frente a fuertes ante presiones interiores. Por otro lado,
su instalación es fácil por la facilidad de sus uniones y por su disponibilidad para
tramos de conducción prolongados. En cuanto a la instalación, tanto su trans-
porte como su manipulación es sencilla y económica, ya que cuenta con un peso
por metro lineal bajo y no hace falta utilizar, en la conducción, un espesor muy
grande, dada su alta resistencia.

Los accesorios para la ejecución de uniones, reducciones, derivaciones, codos,

curvas, conexiones por junta plana, etc., mediante soldadura por capilaridad es-
tarán fabricados de tubo de cobre de las mismas características que el tubo al
que han de unirse o podrán ser accesorios mecanizados de bronce o latón de ca-
racterísticas y propiedades según norma ISO 1338 (bronce y latón) o UNE 37.103
Parte 1 Ref. 6440 (latón), preparados para soldar al tubo de cobre por capilari-
dad. Las medidas y tolerancias de los accesorios de cobre, bronce o latón serán
acordes con las características dimensionales del tubo al que han de unirse.

Tuberías de acero
El tubo de acero se fabrica a partir de banda de acero laminada en caliente y sol-
dada longitudinal o helicoidalmente. La composición del tubo de acero soldado,
helicoidal o longitudinalmente, ha de cumplir con lo que está establecido en la
norma UNE 36.090 y el tubo de acero sin soldadura ha de cumplir lo estableci-
do en la norma UNE 36.080. Los tubos de acero deberán cumplir la norma UNE
19.040 en lo relativo a dimensiones y las normas UNE 19.045 o 19.046, según
sean con soldadura o sin soldadura, respectivamente, en lo relativo a las carac-
terísticas de los mismos.

Por otra parte, las conducciones de acero inoxidable empleadas para la cons-
trucción de instalaciones receptoras se fabrica normalmente por conformación
mecánica de banda de acero inoxidable soldada longitudinalmente mediante
soldadura eléctrica. La composición del tubo de acero inoxidable será del tipo F
3504 (X 6 Cr Ni 19-10) según norma UNE 36.016. En lo relativo a características y
dimensiones, el tubo de acero inoxidable debe cumplir lo prescrito en la norma
UNE 19.049.

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Tuberías multicapa
Las tuberías denominadas multicapa son aquellas que están fabricadas tanto
en materiales termoplásticos como polietileno reticulado (PEX), como en una
combinación de éste último y aluminio (PEX-AL-PEX). Aunque su implantación
es mucho menor, ya que se trata de un tipo de material que se utiliza desde hace
poco tiempo, su crecimiento en los último años está siendo muy importante.

Las tuberías multicapa son muy resistentes a la corrosión, y en comparación con

las de acero y cobre proporcionan al menos el mismo nivel de seguridad, a lo que
hay que sumar que cuentan con una mayor flexibilidad. Las tuberías multicapa
se instalan con sencillez y de manera rápida, reduciendo el coste total de la ins-
talación porque es necesaria menos mano de obra. También requieren menos
accesorios de instalación y un menor número de codos. Este tipo de conduccio-
nes permiten una uniformidad en las diferentes técnicas de instalación de gas,
agua, calefacción central o suelo radiante, entre otros.

Los sistemas de tubos multicapa para gas, normalizados y certificados, ofrecen

todas las garantías requeridas y permiten nuevas formas de distribución del gas
natural, como por ejemplo el gas natural licuado, favoreciendo que este combus-
tible llegue a un mayor número de usuarios sin necesidad de costosos gaseo-
ductos. De esta manera, las distribuidoras de gas están apostando por sistemas
que, con idénticas condiciones de seguridad, contrubuyen a una reducción de
costes por material y tiempo de ejecución.

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7. Seguridad y
mantenimiento de las
instalaciones de gas
El Comité Técnico de Normalización de AENOR CTN 60 (Combustibles gaseosos e
instalaciones y aparatos de gas), es el encargado, en España, de aprobar y publicar
las diferentes normativas acerca de las instalaciones receptoras de gas. En este mo-
mento, está vigente la norma UNE 60670, que determina los criterios técnicos y los
requisitos esenciales de seguridad, así como las y las garantías de buen servicio, que
se deben utilizar al diseñar, construir, ampliar, modificar, probar, poner en servicio y
controlar periódicamente las instalaciones receptoras de gas. También señala las
condiciones de ubicación, instalación, conexión y puesta en marcha de los aparatos
de gas.

En julio de 2015 entró en vigor la norma UNE 60670, que derogaba a la anterior, del
año 2005. Estas normativas son efectuadas por la Asociación Española de Normali-
zación y Certificación (AENOR), el representante español de organismos internacio-
nales y europeos de normalización. La norma UNE 60670 indica al detalle las condi-
ciones de uso de tuberías, elementos y todo tipo de accesorios de las instalaciones
de gas. El apartado del mantenimiento se describe en el apartado 13, sobre ‘Criterios
técnicos básicos para el control periódico de los aparatos a gas de las instalaciones
receptoras en servicio’.

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En las partes 10, 11, 12 y 13 de la norma UNE 60670 se establece la verificación del
mantenimiento de las condiciones de seguridad de los aparatos en su instalación, las
operaciones en instalaciones receptoras en servicio, los criterios técnicos básicos
para el control periódico de las instalaciones receptoras en servicio y los criterios
técnicos básicos para el control periódico de los aparatos a gas de las instalaciones
receptoras en servicio.

El mantenimiento de las instalaciones se debe realizar de acuerdo con varias inspec-

ciones técnicas periódicas, una todos los años y otra cada 4 años. En las pruebas se
comprueba la estanqueidad de la instalación, el cumplimiento de toda la normativa y
el buen funcionamiento de los aparatos de gas.

En la última modificación de la norma UNE 60670 se especifican las comprobacio-

nes mínimas que es obligatorio realizar junto al fabricante para la puesta en marcha
de aparatos de gas conectados a instalaciones receptoras. Para los profesionales
del sector, la instalación de aparatos de gas y la activación de un sistema de gas no
necesita autorización administrativa y la conexión de los aparatos a instalaciones
receptoras debe realizarse según la norma UNE 60670-7 sobre los requisitos de ins-
talación de los aparatos a gas.

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www.valvulasarco.com

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