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TEMA 2: LA CONFORMACIÓN DE UN ESTADO MUNDIAL, LA GLOBALIZACIÓN

ECONOMÍA Y SU PROYECTO EDUCATIVO.

LECTURA: “PECULIARIDADES DEL DESARROLLO ESTADO-NACION


MEXICANO”

El autor Presenta una concepción de estado donde manejan una estructura


primordial de desarrollo, Poulantzas sintetiza muy bien la situación cuando dice que
tanto el campo de la teoría marxista como en las ciencias sociales anglosajonas falta
un adecuada teorización del fenómeno estatal.

El estado es la expresión y el resultado del desarrollo de la sociedad civil. El caso


inglés es un ejemplo de ello. El desarrollo de la sociedad capitalista, el surgimiento
de sus rasgos básicos (industrialización, urbanización, desarrollo de una estructura
de clase capitalista) es el trato de un desarrollo relativamente autónomo de la
sociedad civil.

En América Latina el proceso fue diferente, como bien lo expresa O´Donnell, ha sido
el estado “quien ha determinado en gran medida las principales características de
nuestras sociedades”. En México, el estado no es la consecuencia del desarrollo del
capitalismo, sino que es uno de sus motores más relevantes.México es uno de los
casos que por lo menos, la misma elite dominante del periodo constitutivo del México
moderno tenían conciencia y conocimiento de la modalidad particular de la relación
entre Estado y Sociedad.

Muchos de los portavoces intelectuales de este grupo sucumbían ante los facilismos
propios del idealismo y el voluntarismo argumentando de muchas maneras que
mediante la expansión de la educación y la cultura se lograría constituir a los
ciudadanos en “libres e iguales”. Pero la tarea del estado no era solo educativa y
cultural.
para Justo Sierra, el estado no solo debería apoyar al desarrollo del capitalismo, sino
que debía el mismo asumir funciones activas como promotor y productor tanto en el
campo que a nosotros nos interesa: el de la educación y la cultura.

El estado actúa directamente como productor y difusor de sistemas simbólicos; la


constitución de un mercado nacional en materia de producción y circulación de
productos simbólicos (saberes, creencias, visiones del mundo, etc.), se constituirá en
una tarea prioritaria y conscientemente organizada del Estado mexicano moderno.

La política cultural del Estado no está sola, si no que se inserta armónicamente en


todo un proyecto orgánico de intervención social tendiente a poner los cimientos y las
condiciones básicas para el logro del “progreso”.

José Revueltas hace una mención sobre el “desarrollo histórico ‘normal’ de México,
desde su punto de vista puramente abstracto, ’debió’ ceñirse al siguiente esquema…

1.- desarrollo de las relaciones capitalistas de producción.

2.-consumacion del proceso de integración nacional

3.- “independencia política del país, es decir, nacimiento de la nación mexicana.

Como afirma Cordera Campos “muchos de los países que desde el principio
estuvieron en el capitalismo no siempre fueron a la vez capitalista. Tal es el caso de
México.

Los conservadores y liberales ocupan un escenario en los países centrales en donde


el liberalismo y liberales en México no juegan el mismo papel que jugaron en la
construcción del Estado-Nación europeo. Ya que el liberalismo, dominante a partir de
1867, sufre las contracciones propias del desarrollo capitalista “tardío y
dependiente”1 que se derivan de la ausencia de una fuerte y organizada burguesía
nacional actuando en el marco de la “libre competencia”.

1
*Tenti, Emilio. “Peculiaridades del desarrollo del Estado –Nación mexicano”, en el arte buen maestro. México, Ed. Pax, pp. 34.
Lectura 2: “la integración de México al mercado capitalista mundial”

Explique cuáles son las principales transformaciones que se dan en el seno de la


sociedad mexicana desde la reforma hasta el porfiriato lo más relevante que sucedió
del ideal al liberalismo, constituido en una fuerza política dominante. La nación
liberal, de acuerdo con este proyecto era lo de una república democrática, constituida
por un conjunto de ciudadanos libres estaban dotados de propiedad y de instrucción.

La reforma proporciono las bases y el marco jurídico sobre el que habría de


desarrollarse el proceso de crecimiento iniciado en el porfiriato. En el momento de la
reforma, la sociedad mexicana continuaba dominada por una serie de comisiones
económicas y sociales que limitaban el desarrollo de las relaciones capitalista de
producción.

El gobierno liberal toma una serie de medidas destinadas a desbloquear la


propiedad, con la finalidad última de favorecer la expansión de una capa de
pequeños propietarios libres.

Pero hay una gran coincidencia en donde se puede afirmar que las tierras
desamortizadas a la iglesia y a las comunidades indígenas pasaron a ser explotadas
bajo el tipo de agricultura latifundista a base de propiedades con grandes
extensiones de terreno, con características como las de las grandes haciendas
creadas durante la época colonial. En opinión de Florescano y Lanzagorta, y de
acuerdo con las investigaciones de J. Basant en el campo, donde la iglesia en lugar
de muchas pequeñas propiedades rusticas tenía pocas pero extensas haciendas y
latifundios, estas pasaron a manos de pocas personas con la excepción de El Bajío,
donde algunos latifundios lograron fraccionarse.

La reforma contribuyo a lograr la aparición de una economía del mercado en México.,


Leopoldo Solís, dijo que “la ley de nacionalización de los bienes eclesiásticos,
promulgada por el entonces gobierno de Juárez en el año 1859…”permitió que con la
propiedad urbana y rural se emprendieron nuevas actividades… fue en efecto, un
paso hacia la economía capitalista basada en transacciones de mercado”

En realidad puede afirmarse que los grandes acontecimientos sociopolíticos de la


reforma se orientaron objetivamente a la creación y expansión del mercado interno y
la conformación de un Estado Nación integrado.

Según Cordera Campos y Ruiz Duran, con la reforma se inicia una fase que ellos
denominan de “Transición hacia el capitalismo dentro del capitalismo”, en el sentido
de que “en este periodo domina la expansión del capitalismo por sobre el desarrollo
capitalista; se trata entonces de un proceso de “ocupación” y “desarrollo” territorial y
estructural de la Nación por parte del capitalismo”

En la mención que hizo Según Vernon, “cualesquiera que hayan sido los motivos, la
era porfiriana produjo el primer gobierno mexicano con una estrategia dirigida para
lograr el desarrollo económico”, “que consistía en tomar cualquier medida que fuera
necesaria para alentar grandes cantidades de inversiones extranjeras”. 2

El concepto porfiriano de la economía mexicana era una tricotomía:

a).- el gobierno encargado de mantener las condiciones que atraerían capital


extranjero

b) el sector privado, extranjero, que promovería el crecimiento del país por medio de
la inversión

c) el sector privado, nacional, algunas partes selectas del cual se beneficiaran con
las actividades creativas de los extranjeros.

Esta fórmula dio un gran paso para el crecimiento de la economía de mercado que
se reflejó en un proceso de expansión económica, que se hicieron presentes en la
ley6 de desamortización. A través del intercambio también se dio el crecimiento de la

2
*Tenti, Emilio. “La integración de México al mercado capitalista mundial”, en: él arte buen maestro. México, Ed. Fax, 1988,
pp.46-50.
demanda interna acentuó esta tendencia y establecimiento de los ferrocarriles y la
supresión de las aduanas interiores completaron el fenómeno.

Otro de los suceso importantes fue sobre la constitución de nuevas haciendas


latifundios freno la liberación de la mano de obra y por lo tanto la expansión del
mercado de trabajo.

En 1890 la economía mexicana muestra características que le resultaron


permanentes, terminaron las líneas troncales ferroviarias más importantes, las
nuevas comunicaciones reorientaron el comercio exterior, y por primera vez se
enviaron tres cuartas partes de las exportaciones totales a los estados.

Con esto puede afirmarse que el desarrollo económico que se verifica durante el
porfiriato es el fruto de un proceso de constitución de un mercado nacional limitado, y
fue posible a partir de la expansión de ciertas actividades tradicionales, como la
minería y de otras, como la agricultura comercial y la industrial, que en ese periodo
adquieren un fuerte impulso. Al igual lo que termino de impactar fue la construcción
de una red nacional de transporte ferroviario, al mismo tiempo que contribuye la
integración nacional, facilita el acceso al mercado norteamericano, el cual desde
1873 comienza desplazar los mercados europeos.
LECTURA 3: “IDEOLOGÍA Y POLÍTICA EDUCATIVA DEL LIBERALISMO EN EL
PODER”

La doctrina positivista, puede ser definida como la corriente del pensamiento que da
una nueva forma la liberalismo, en los estudios realizados en los términos políticos el
positivismo enfatiza la necesidad del orden por sobre los derechos y las libertades.
Aunque la libertad no era un punto de llegada si no el resultado del orden más el
progreso material.

La ideología liberal como negación se pasa a la afirmación. El neutralismo cultural


del Estado se transformara en “positivismo cultural”. El primer ideólogo del
liberalismo en el poder, Gabino Barreda, des ‘pues del triunfo de Juárez, expresa en
nuevo tipo de exigencias. El estado deberá jugar en este terreno un papel cada vez
más activo y positivo. No solo educara a la libertad, enseñar y aprender, si no que el
mismo deberá constituirse un educador. En la doctrina positiva.

Es necesario que el estado se instalara en las conciencias, removiendo los hábitos


tradicionales y reemplazándolos por un “fondo común de verdades” que por
científicas podían ser aceptadas por todo el mundo. La libertad de enseñar se
concilia con la obligatoriedad de aprender. Como lo expresa Gabino Barreda, “la
circunstancia de que muchas personas del partido liberal creen todavía de buena fe
que la obligación decretada por la ley de adquirir la instrucción primaria es
inconciliable con los principios que profesan… los hacen combatirla” i.

Al extenderse su hegemonía sobre el conjunto de la sociedad, el positivismo


contribuirá a la tarea de unificación e integración nacionales. Donde se requería de la
integración moral y cultural que acompañara y favoreciera el proceso general de
desarrollo del Estado-Nación.

Emilio Rabasa, respecto de la educación afirmaba que “no se trata de una panacea
ni social, ni moral. Los vicios que achacan al mexicano, como la indolencia y la
inclinación al robo, bastante conexos, están sujetos a modificarse y a desaparecer no
solo por la acción de la escuela, esto sería eficaz funcionando aisladamente, si no
para la transformación coincidente de las condiciones del trabajo nacional.

Con respecto a la educación indígena, el mismo Rabasa advertía que “antes de


enseñarles a leer, es necesario libertad del indio de sus propias miserias y de las que
le crea la clase superior que le rodea”.

En estos casos era más aconsejable educar mediante la construcción de caminos y


obras de infraestructura para despertar al indio, para prepararlo a una vida civilizada,
la escuela viene después por sí sola, razona Emilio Rabasa, cuando los hijos de los
colonos blancos o mestizos, y solo entonces es provechosa para los niños indios, sin
la compañía de aquellos perderían lo más útil de la enseñanza.

La ley de la educación sancionado en 1867 otorga a la educación elemental


impartida por el Estado sus tres características básicas: la obligatoriedad, la
gratuidad y el laicismo. Características que serán reiteradas por la legislación
posterior en 1874, 1888,1908, etc.

La obligatoriedad se imponía porque el deseo de instruirse no está uniformemente


distribuido entre las clases sociales. (José Díaz Covarrubias), “entre las clases
sociales de inferior posición, por poco ilustradas, lejos de ser general y espontaneo el
deseo de educar a los hijos, se necesita de alguna coacción y de la vigilancia de la
sociedad misma (...) nosotros no concebimos un derecho que consiste en elegir entre
la educación y la ignorancia”.

La práctica pedagógica se define siempre por una acción de inculcación que es


siempre impositiva, aun cuando para ciertas clases parezca no serlo en virtud que
experimentan un deseo para educarse que tiende a parecer natural. En cambio la
acción pedagógica reviste sus más nítidos caracteres impositivos en el caso de las
clases populares para quienes el deseo de educarse no es “natural”.

En el campo ideológico la idea de la intervención estatal en la Educación adquiere


una consistencia particular durante la realización de los congresos de Instrucción
convocados por el ministro Joaquín Baranda, en 1889 y 1890 respectivamente. El
primer congreso inaugural, el ministro de la justicia e instrucción pública, subrayo la
definitiva relación que une la educación y el poder. (Baranda): “la enseñanza es el
elemento principal para dominar a los pueblos”.

El pensamiento de la escuela completamente libre, autónoma… no ha dejado ni


dejara de ser una utopía mientras en la sociedad existan interés o puestos,
colectividades antagónicas que quieren rivalizar con el estado y dominarlo, lo cual
fácilmente podrían conseguir a la sombra de esa insostenible soberanía escolar”.

Baranda expresaba con claridad cuál era la dirección a seguir. “el estado no se
suicida, decía y suicidarse seria mostrar indiferencia respecto a la instrucción de la
juventud, en las que los pueblos antiguos y modernos, bajo distintas formas de
gobierno han vinculado su fuerza y su gloria y su porvenir.

Educar al pueblo se constituía en un objetivo político, por eso afirmaba Baranda que
“el ejecutivo se ha ocupado de preferencia de la instrucción democrática, porque se
preparaba el mayor número de buenos ciudadanos” Cisneros exigía que se aclarara
si el congreso “aspira a que todos los niños reciban una enseñanza laica o se
propone, inconsecuentemente con los principios de uniforme y obligatoria que ha
asignado a la instrucción primaria, que México permanezca en un pernicioso statu
quo, tolerando que una parte de la niñez reciba una enseñanza enteramente laica y
la otra una enseñanza religiosa en su totalidad, y enemiga en absoluto de las
libérrimas instituciones que nos rigen”.

Para que la instrucción primaria sea uniforme en sus bases argüía Cisneros se
necesita que sea obligatoria para todos, gratuita para todos y laica para todos. En
síntesis Cisneros propone que si se considera pues que todos los niños deben recibir
enseñanza laica, habrá de convenir que esto no se conseguirá sino obligándolos a
concurrir a las escuelas oficiales, o las revestidas de carácter laico y sujetas a
inspección oficial.

Lo que Sierra quería demostrar es que si la cultura religiosa permanecía en el ámbito


de la vida privada del hombre no tenía que entrar en contradicciones con un moral
laica y patriótica, respetuosa de los principios constitucionales y las leyes de la
república.

“la escuela laica dice Sierra- es un soberano organismo de paz, continuadora,


coadyuvadora y reforzadora de la familia (…) la patria une, no divide; el estado es un
poder conciliador”. Las doctrinas y creencias nada tienen que hacer en la escuela.

Sin embargo el derecho que tiene el padre de educar a su hijo tiene sus limitaciones,
la primera es para Sierra “el derecho del niño”. Esto conlleva que el padre no tiene
derecho a la no educación del hijo. De este modo Sierra y elude el problema de la
intervención del Estado en los contenidos de las accione sede inculcación privadas
para orientar la acción del poder público hacia una tarea de vigilancia del
cumplimiento del principio de la obligatoriedad de la enseñanza.

Estas leyes naturales son tan verdaderas que aunque fueran obra de un “supremo
legislador” este “no tenía por qué deshacerla a su antojo”. La escuela era la encarda
de difundir este nuevo gama de conocimientos culturales.
i
*Tenti, Emilio. “ideología y política educativa del liberalismo en el poder, en: El arte del buen maestro. México. Ed. Pax.

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