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Para la elección del tema, cada uno de los integrantes le dio lectura a tres de sus
preguntas, las cuales consideraban principales para poder comparar las preguntas
de todos.
Las cuestiones que mas resaltaron al momento de comparar las preguntas que
cada miembro realizo fueron:
a) ¿Por qué las leyes dicen mucho, pero explican poco o nada?
b) Inconvenientes en las leyes
c) Mala estructuración de las leyes
d) ¿porque fallan las leyes?
Opciones de títulos:
¿Qué es una norma?, a simple vista puede considerarse como una palabra
sencilla e incluso se puede dar por sentado el hecho de que conocemos su
significado, sin embargo, ¿realmente podemos dar respuesta de una manera
correcta a esta interrogante?, ¿conocemos el impacto trascendental que estas
tienen en nuestras vidas?, son cuestionamientos que debemos hacernos dado que
vivimos en una sociedad que está regulada bajo normas jurídicas, es decir, estas
sostienen todo el entramando social y por lo tanto la relevancia de las mismas es
más que predominante.
Una norma se define como una regla u ordenación del comportamiento humano
dictado por la autoridad competente, con un criterio de valor cuyo incumplimiento
lleva a una sanción y que, de manera general, impone deberes, pero al mismo
tiempo confiere derechos. Las normas jurídicas son formuladas en un lenguaje
ordinario a los efectos de comunicar, con relativa certeza y facilidad, que deben
producirse determinadas pautas de comportamiento.
Es así que las instituciones encargadas de formular y aplicar las normar jurídicas
que nos rigen en sociedad, nos establecen lo que es obligatorio, prohibido y
permitido, así que por lo tanto también se encarga de fijar lo que está bien y lo que
está mal. Mas una cuestión significativa aquí es, ¿en qué se basan realmente las
autoridades para elaborar o modificar una norma?, ¿realmente tienen interés en la
consideración necesidades sociales?, ¿las normas que son creadas nos
benefician objetiva y verdaderamente? En caso de analizar profundamente estos
cuestionamientos y tener respuestas negativas, contestaciones que no nos
satisfacen, sentimientos que nos dejen una inquietud alarmante y que a
consecuencia de esto aparezcan nuevos cuestionamientos, es aquí donde
debemos involucrarnos como sociedad así como caer en cuenta tomando
conciencia que estas normas no nos ayudan, mucho menos nos benefician para
contribuir a un desarrollo optimo y colectivo del conglomerado social, ¿por qué las
permitimos?, ¿por qué dejamos que nos regulen?, ¿por qué no exigimos a
nuestros representantes una modificación cuando estas llegan a atentar en contra
de nosotros? Y, sobre todo, lo más importante: ¿por qué no nos informamos de las
normas sobre las cuales nuestra vida en sociedad se rige continuamente?
Destacamos este último cuestionamiento debido a que nos resulta inaceptable el
hecho de tratar de modificar algo o de crear un cambio con significado en nuestras
normas jurídicas cuando desconocemos profundamente cuáles son las normas
que nos gobiernan, es así como nos encontramos injustificable el hecho de que,
en la mayoría de los casos, si no es que, en su totalidad, se deben a una completa
ignorancia o desinterés intencional del tema. Solemos iterar constantemente que
nos encontramos disconformes de la situación política, económica y social en la
que vivimos, más otros aspectos que día con día vemos que no se encuentran
desplazando de una manera correcta, pero en ningún momento nos preocupamos
por generar un cambio verdadero desde el origen, es por esto que consideramos
que un primer paso para contribuir a una transformación primordial es el asegurar
que se encuentra en el ser una sociedad que está informada y que por
consecuencia sabrá exigir lo que le corresponde.