Mario Raúl Triviño 2004

Calendario Solar y Cifrado de Formulas en Formas Geométricas

Tres siglos antes de Jesús, el Rey Ptolomeo III intento reformar el antiguo
calendario solar que regia el año civil en Egipto. Tenia razones para hacerlo. Desde
que fue aceptado el Calendario Oficial, de 360 días, subdivididos en 12 meses, de 30
días, cada uno notaba un desajuste notable con el año real, (365 días mas ¼), para
minimizar la diferencia los Egipcios Añadían 5 días No Computables, (epagómenos)
Que se consideraban “Peligrosos”, porque atraían “Desgracia”.

En realidad Ptolomeo III solo pretendía introducir una mínima reforma, añadir un
día cada 4 años, para hacer coincidir el calendario con el Año real. Evitando el
Absurdo de que con el creciente desfase, el verano civil acababa cayendo en el
invierno Natural. No obstante tubo que renunciar a su proyecto, ante la firme
oposición del Clero. El calendario solar que regia el año fue revelado por los Dioses y
era Intocable.

Esa resistencia plantea un llamativo enigma histórico. Los Egipcios conocían bien la
duración exacta del año real mucho antes de que Ptolomeo III intentara su reforma.

Según Eudoxo de Cnido en su “Ars Astronómica” en el siglo IV A.C. Los Egipcios

estaban en condiciones de Armar el Calendario “Exacto”, de 365 Días más ¼.
De hecho disponían de Un Ciclo Anual Sótico, que tenia esa duración precisa, basado
en la salida helíatica de la estrella Sirio. (Esto quiere decir que Sirio y el Sol,
coincidían en la salida).

También poseían un calendario Lunar anterior al Solar, y reservados a Usos

Litúrgicos.

¿Por qué entonces se empeñaron en mantener el año de 360 días mas los 5 no
computables, que solo coincidía con el año natural cada 1461 años?

La mayoría de los historiadores ha basado que esto fue así debido a una forma
“Conservadora” de Egipto, Sin embargo semejante explicación resulta
“Insostenible”.

En plena Helenística, cuando se conocía ya la duración del año natural, tanto en

Egipto como en el mundo antiguo, el esquema del antiguo calendario solar, fue
siempre de 360 días mas 5 añadidos.

Aparece de esta forma en los diagramas Griegos del Cosmos, que circularon por todo
el mediterráneo, y que también se utilizaron como calendarios. Entre ellos el de
Metrodoro de Escepsis (150-71 A.C.). No recogían la estructura general de 360
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Unidades, mas 5 agrupadas en 12 segmentos de 30 loci (Lugares), correspondientes

a los signos astrológicos. Ya que también incluían el sistema Egipcio de los decanos,
(Base de los decanatos astrológicos posteriores).
Estos eran estrellas y constelaciones que determinaban las semanas de 10 días (36
cada año). En el diagrama de Metrodoro 360 días graduales, mas 4 estacionales, y
un central.

El mismo calendario solar, regia la vida religiosa, de los Escenios de Qumram, para
quienes era la ordenación del tiempo revelada por Dios, y una replica autentica de
los coros angélicos que oficiaban en el templo celeste según Ignacio Gomez de Liaño
(El circulo de la sabiduría, Edit. Siruela). Su sistema al parecer de origen sacerdotal,
se componía de 360 días normales, 4 estacionales, y 1 de rememoración.
El mismo esquema que vemos en Egipto, donde hallamos 360 días computables, 4
epagomenos, correspondientes a los hijos de Nut, y Geb y 1 consagrado a Horus.
También los Esenios utilizaban ese sistema, en lugar del calendario lunar Judío. La
única diferencia entre el calendario Esenio y el Egipcio lo encontramos en que los
Egipcios tenían 3 estaciones de 4 meses, y los escenios 4 estaciones de 3 meses.

Los 5 días de Thot

En la primera cosmogonía Egipcia surgida en Heliopolis, donde hoy esta el

Aeropuerto del Cairo, a comienzos del III milenio A.C., el Dios supremo Atum Ra,
procreo por masturbación a la pareja de gemelos, Tefnut, Diosa del Fuego, y Shu
(Dios del Aire), de estos nacieron Nut, Diosa del Cielo, y Geb, Dios de la Tierra.
Pero entonces surgió un curioso conflicto. Atum Ra no aprobaba la unión de Nut y
Geb, por lo que prohibió a la Diosa tener hijos, en cualquiera de los 360 Días del Año.
Sin embargo el Dios Thot, que también amaba a Nut, jugo una partida de damas con
la Luna, y le gano 5 días completos, que añadió a los 360 días existentes. Burlando
así la prohibición de Ra y permitiendo así que Nut diera a luz, a los 4 hijos
engendrados con Geb: “Osiris”, “Isis”, “Seth”, y “Nepthys”.

Ese fue el Origen de los Días Epagomenos. A los cuales se añadió un 5 consagrado al
hijo de Osiris e Isis, “Horus”.
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Como en el Génesis Bíblico, también en esta mitología de los orígenes, el tiempo

profano surge de una “Caída”, y ya no es tiempo de los Primeros Dioses Estelares,
por eso los 5 días Epagomenos No eran Computables en el Calendario.

Los días computables reflejaban el Tiempo celeste, que se vinculaba a las estrellas
siempre visibles, Como las circunpolares, (Las Indestructibles). Mientras que los 5
Epagomenos, correspondían a los dioses hombres, asociados a las constelaciones
como Orión (Osiris), y a estrellas como Sirio (Isis). Que presidían el tiempo humano,
y por eso salían y se ponían en determinadas fechas, a lo largo del ciclo anual.

Para los Antiguos Egipcios su país era un espejo del cielo, y el Nilo equivalía a la Vía
Láctea. Como han observado muchos investigadores la orientación de sus edificios
sagrados se correspondían con las estrellas y los Atros.

¿Pero como veía esta gente al Tiempo?

Básicamente veían el recorrido circular del Sol, en el Horizonte y a lo largo del Año,
respecto a las constelaciones Zodiacales. Al dividir el Firmamento en 12 sectores, de
igual extensión, (30 Lugares cada uno). El circulo del horizonte constituía el limite
inferior de la banda del cielo del zodiaco, quedaba subdividido exactamente en 360
partes, por eso lo encontramos en los diagramas de la Helenística, como en el de
Metrodoro o el de Enoch Etíope del libro del curso de las luminarias, del siglo III A.C.
Mencionados por Gomez de Liaño. Esta subdivisión fue el modelo sobre el cual se
elaboro el calendario solar. A Imagen del Cielo. Esto se elaboro mediante la
observación de la salida y la puesta de determinadas estrellas a lo largo de periodos
de 10 días se crearon las semanas, 36 semanas en cada año. Tomando como modelo
el drama cósmico que reflejaban los astros como Orión y Sirio.

El año se subdividió en 3 estaciones, momentos claves del ciclo de la inundación del

Nilo, que tenían correspondencia con el mito de Osiris y los 3 momentos clave del
mito. (Inundación, Germinación, y Cosecha).

Del mismo modo que Isis reunía los 14 trozos en que Seth había dividido a Osiris, y
lo resucitaba Sirio reaparecía después de una ausencia de 70 días, Presidiendo la
Ascensión de Orión. También se observa este juego de similitudes entre el cielo y la
tierra, el zodiaco egipcio constaba de 14 signos, asociados a otras tantas
constelaciones que representaban a los trozos del cuerpo del Dios: La cabeza era
“Aries”, La Osa Mayor era parte de la constelación del Muslo, el corazón correspondía
a Leo. Y el miembro viril a Escorpio. En este contexto el calendario solar no era solo
un cómputo del tiempo, sino también una imagen de la Creación Entera. Y por eso lo
adoptaron Metrodoro y los Esenios de Qumram, como diagrama Astrológico del
Cosmos.
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Probablemente estamos ante el embrión de una gran conquista científica, que

fructificara durante la Helenística, la división del circulo en 360 Grados.
No cabe duda de que la subdivisión del zodiaco, en 12 sectores de igual extensión,
(30 días), aunque principalmente se percibiera como de naturaleza temporal, el año
perfecto creado por Ra, sugería la posibilidad de tratar a cualquier círculo tratándolo
de la misma manera.

Por eso basándose en los mencionados diagramas del cosmos, en el siglo II A.C.
Hipsicles subdividió a su vez cada uno de los 360 grados en 60 minutos y a estos en
60 segundos.

No era posible añadir reformas ya que una reforma hubiese supuesto abolir el orden
cósmico, que refleja todo este sistema. Los meses de distinta duración habrían
destrozado el esmerado mecanismo de correspondencia que vinculaba a cada mes
del año, con una constelación y con el sistema de decanos.
Casa una de las piezas de este engranaje cumplía una función cosmológica concreta
y transformaba al calendario en un gran reloj cósmico, y en una imagen de la
Creación entera.

No es casual que el año constara de 3 estaciones, estas presentaban la Unidad

Sagrada, de la primera triada divina, Atum padre de Tefnut y Shu. Y el uno que era
se transformo en 3. Lógicamente de aquí salen los 4 meses de las 3 estaciones, que
al hacer (4 x 3 = 12). El vínculo entre ambos números esta también presente en la
base cuadrada y los 4 triángulos de las pirámides, nos remite a la cifra 4 x 3 = 12
Que simboliza el tiempo completo, y el círculo celeste, una clave que también se
reflejaba en la subdivisión horaria, 12 horas de día y 12 de noche.

Es posible que los antiguos egipcios no hayan reparado en que esta estructuración
cósmica, podía aplicarse a la Geometría. Y en consecuencia no dividieran el círculo
en 360 grados. Prestigiosos especialistas, como A. Lauer, han afirmado que carecían
del concepto del ángulo, y de hecho en sus sistemas lineales, para medirlos no
hallamos ningún indicio técnico de que conocieran este método.

Sin embargo esto no supone que no tuvieran el saber teórico necesario para
desarrollar dicha herramienta técnica. También los romanos atesoraron el suficiente
dominio de la hidráulica como para construir maquinas de vapor, y no lo hicieron. Así
como los precolombinos poseyeron todo el saber para desarrollar la Rueda, pero sin
embargo no hay evidencia de que lo hayan hecho.
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Tampoco se puede descartar que hayan poseído este saber y lo hayan guardado en
secreto. Reservado a iniciados o algo así. Manteniéndolo al margen de cualquier
aplicación practica y de las formulas aritméticas que se recogen en el papiro Rhind.

Al fin y al cabo, los únicos documentos matemáticos que han llegado hasta nosotros
son un par de manuales destinados a formar agrimensores y contables. No se ha
descubierto a ninguno que trate a estas materias como algo esotérico. Aunque es
evidente que la civilización egipcia manejaba muy bien el simbolismo sagrado, los
números y la geometría.

La evidencia puesta de esta forma plantea la existencia de una cultura (Atlántida,

quizá …?) que trasmitió a los antiguos egipcios en forma Codificada, ya que el
conocimiento no es paulatino, sino que se presenta en forma repentina, tal cual
ocurre en el Renacimiento Europeo. Estos conocimientos avanzados que conocieron
los egipcios en forma Codificada sugieren la Constante PI, o la división de círculos en
360 grados. Codificando este saber en sus mitos de la Creación y en el Calendario.

Y si así ha sucedido ¿Por qué esta inteligencia no ha querido dejar huella ni

testimonio de su existencia?

¿Se trata de una supercultura con conocimientos avanzados que prefirió mantenerse
en el anonimato?

Como se observa la codificación del numero PI en el mito de Osiris, no se trata de

que dicho valor aparezca en fracciones egipcias, sino que esta en valores decimales.
Discrepando con varios investigadores que admiten que el “0” y los números
decimales aparecen recién en el año 500 D.C.

Ahora vemos que ocurrió lo mismo con la subdivisión del circulo en 360 grados
conocimiento que pudo ser introducido a través del calendario Solar.

Los profesores de historia de la ciencia, Giorgio de Santillana y Herta Von Dechend,

sostienen que con los números que aparecen en el mito de Osiris se pueden calcular
con precisión varios fenómenos astronómicos como la presesión de los equinoccios
El cual indica que el punto por el que sale el Sol en el Equinoccio de Primavera se
desplaza en sentido retrogrado 1 grado cada 72 años, y 30 grados cada 2160 años.
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Completando el circulo del zodiaco en 25920 años. Al cabo de los cuales vuelve a
salir por el mismo punto equinoccial. Este ciclo astronómico se conoce como Gran
año Platónico, y como Gran año Egipcio.

A juicio de estos autores la introducción de un saber técnico avanzado, codificado en

los mitos, pudo ser el recurso utilizado por una cultura muy superior, para garantizar
la conservación de dichos conocimientos a través del tiempo. Ya que como ocurrió
con el frustrado intento de Ptolomeo III, siendo el mito historia sagrada de los
sacerdotes, se transmitiría literalmente sin cambiar su contenido.

Es posible que el calendario solar civil que solo coincidía con el año sótico una vez
cada 1461 años de duración (Duración del ciclo Heliático de Sirio y Sótico del Sol).
También permitiera definir otros ciclos cósmicos que todavía no hemos detectado.

Si se incluye su correlación con el calendario lunar. Schwaller de Lubics sostenía que

este ultimo permitía establecer un ciclo de 25 años (309 lunaciones) a partir de las
cuales se podía deducir con total exactitud la duración promedial de cada mes lunar
es de 29,5307 días.

La clave para deducir este tipo de conocimientos encriptados, consiste en analizar

sin prejuicios la base documental, algo que se resisten a hacer los historiadores
ortodoxos, quienes se niegan a aceptar que el hombre hubiera conseguido un
desarrollo cultural e intelectual tal elevado en una época en la cual la ciencia oficial
ha definido como “Primitiva”.

Sin embargo no es posible atribuir a azar el saber que atesora el calendario solar
egipcio que surge a fines del IV Milenio A.C. salvo que el “Señor Azar” se halla
comportado como los Dioses Egipcios, revelando a través de mitos y calendarios un
saber preciso coherente y racional, que los seres humanos descubrirían solo milenios
mas tarde. Precisamente a través del estudio de estos antiguos relatos y diagramas
celestes, “Revelado por los Dioses”.

Poco a poco vamos detectando fragmentos de este legado secreto pero todavía nos
falta completar el “Puzzle” para descifrar y develar el mensaje que contiene.

Un mensaje transmitido por una misteriosa fuente, que por alguna razón prefirió
mantener en la sombra su actividad civilizadora, al servicio de la evolución del
Hombre.
3
En otro aspecto cabe destacar al Dios THOT Dios del la Sabiduría, Maestro de las
artes y las ciencias, Padre de la doctrina hermética, y de las palabras sagradas, de
las escritura jeroglífica. L.o representaban con una cabeza de Ibis y en sus manos
una tablilla y un pincel, como escriba de los Dioses, fue asimilado a la cultura Griega
como Hernies Trimegísto. Se le atribuyen 42 obras de las que se destacan: “La Tabla
Esmeralda”, Relato Abstracto de la creación, el Kibalion, El Pimander, El Asclepios;
La Gimnastica; El libro de Enoch y el Libro de los muertos.
Las antiguas obras hacen referencia de un libro de contenido divino, y de carácter
mágico, es nombrado a lo largo de toda la antigua literatura, y es atribuido al Dios
Thot, cuenta la leyenda que este libro compuesto por 78 laminas de oro fue arrojado
al río Nilo, en el interior de un cofre, por considerar el Dios Thot, que los hombres no
estaban preparados para descifrarlo, y convertirse en Dioses.
El Dios Thot creo este libro para transmitir todo su saber sobre el principio y el fin de
la vida a los hombres sabios, pero “Solo Aquel que descifrara los jeroglíficos podría
alcanzar el poder” la leyenda nos habla de un pasadizo subterráneo utilizado por los
sacerdotes en cuyas paredes se hallan los 78 jeroglíficos a la espera de un ser
“Sabio” que los descifrara.
Existe un cuento Egipcio escrito en demótico, del siglo III AC. que habla de este libro
Mágico y divino, la continuación del cuento se escribio 300 años después y describe
a un hijo de Ramsés II, iamuese al que llamaban Setna, como sacerdote de PTA en
Menfis, considerado Sabio, Sacerdote y Gran Mago. Relata la búsqueda incansable
del libro de Thot, que contiene los secretos mas sagrados del conocimiento, pero
cuya posesión significa la maldición para finalmente morir. Aun así para ver su
contenido Jamuese busca y finalmente encuentra el libro, en la tumba de
Naneferkaptah quien reta a Setna a jugarse la propiedad del libro, Setna pierde 3
veces consecutivas, pero utiliza sus artes mágicas para apoderarse del libro,
cerniéndose sobre el la maldición. El espíritu de Naneferkaptah envia una horrible
pesadilla a Setna, para que rectifique y le devuelva el libro, finalmente Setna decide
no enfrentarse al poder de Thot y lo devuelve. -___ -
La figura escaneada de Autocad, no esta a la escala que indica, pero eso deberia
No ser un problema si las proporciones de la foto escaneada se mantienen.
Apéndice 9