Sei sulla pagina 1di 9

PROBLEMAS QUE AQUEJAN AL AMBIENTE

PORTAFOLIO DE NOTICIAS

ARIEL SALAZAR
MANEJO DE ECOSISTEMAS
7mo “A”
Ariel Salazar Romero (2342)

Profesor Patricio Noboa Viñan

Gestión del patrimonio cultural material e inmaterial 7 mo “A”

15 de mayo de 2018

¿Es lo mismo Cultura y Patrimonio Cultural Inmaterial?

Es de total importancia abordar estos conceptos desde diferentes miradas y criterios y

para partir de aquello tenemos que tener claro definiciones que presentan ciertos autores del

ramo como por ejemplo la UNESCO y su corta mirada del Patrimonio Cultural “Inmaterial” que

dicta, “tradiciones orales, artes del espectáculo, usos sociales, rituales, actos festivos,

conocimientos y prácticas relativos a la naturaleza y el universo, y saberes y técnicas

vinculados a la artesanía tradicional”. Así mismo un enfoque sobre lo que es Cultura, por

ejemplo según Benítez y Garcés, “es todo lo que crea el ser humano al interactuar con su

medio físico y social y que es adoptado por toda sociedad como producto histórico”. Con esta

aceración a los conceptos podemos empezar a discernir tales dudas.

Tenemos claro que la cultura hace referencia a toda la producción simbólica o

material, resultante de la praxis que el ser humano realiza en sociedad, dentro de un proceso

histórico concreto, siendo así el legado de grupos sociales, la esencia de las vivencias

heredadas, la construcción colectiva del simbolismo de la vida, estamos hablando de un

concepto amplio que refleja la realidad y la cotidianidad; Pero, no podemos hablar con el

mismo énfasis acerca del llamado Patrimonio “Cultural (comercial)” Inmaterial. Esto de

institucionalizar la cultura es fácilmente vista como un intento de apropiación de las

expresiones culturales para su comercialización, es posible ver más allá del escaso intento por

conservar o salvaguardar la integridad de la cultura en sí, y enfocarnos en los intereses que


tienen por ejemplo países para “sobresalir”, jerarquizando su patrimonio y tomar en cuenta

solo a los más “sobresalientes” para poderlos proyectar al extranjero, esto nos lleva al punto

de partida, simplemente se sigue observando el interés político y económico. El intento

inconsciente de estas instituciones de patrimonializar el estilo de vida hace que se transformen

estas formas culturales extraordinarias por su riqueza generada y transmitida en simples

productos mercantiles. Por ejemplo en el ámbito turístico la cultura es valorada

principalmente por su rentabilidad como espectáculo. La patrimonilización inminente

alimentada por la sed de empoderamiento y negocio esta segada al cambio cultural

considerando la innovación y la transformación como aberraciones porque simplemente si no

es tradicional y arcaico NO VENDE.

Podemos concluir entonces, que la cultura desde la mirada social-vivencial y el

patrimonio cultural inmaterial desde la mirada de institución comercial folclorizadora, están

muy distantes de caminar a la par, porque no se puede ver a la cultura como un negocio y por

el pretexto de salvaguardar y conservar la cultura hacer negocio con la cotidianidad. No por el

hecho de que instituciones conceptualicen categoricen y jerarquicen la cultura como tal,

tengan el poder de aprovecharse de la esencia de la vida para su lucro.


Ariel Salazar Romero (2342)

Profesor Patricio Noboa Viñan

Gestión del patrimonio cultural material e inmaterial 7 mo “A”

15 de mayo de 2018

¿Qué sería lo inmaterial del Patrimonio Cultural Inmaterial?

Hay que empezar aclarando que el órgano rector de la “gestión cultural” sostiene que

el patrimonio cultural inmaterial son “tradiciones orales, artes del espectáculo, usos sociales,

rituales, actos festivos, conocimientos y prácticas relativos a la naturaleza y el universo, y

saberes y técnicas vinculados a la artesanía tradicional”, entonces vamos a desarrollar el tema

sobre las preguntas asociadas a la dicotomía entre lo material y lo inmaterial asociada al

patrimonio cultural que dicen, ¿Esta separación es realmente el resultado de un razonamiento

científico actual o de la acumulación histórica de diferentes cosmovisiones que separan

idealmente al cuerpo, del alma; a la materia, de la conciencia? ¿Es esto realmente separable o

es solo fruto de la imaginación humana?

No podemos tomar al patrimonio con una absurda oposición binaria o dualidad, que

de forma vulgar lo divide en contextos de que si hay algo material existe algo “inmaterial”,

partiendo desde ese punto esta primera propuesta carece de fundamentos y solo es tomada

de forma arbitraria e ilógica. Ciertos autores “analizan” y tergiversan los conceptos y desde

aquí existen varias visiones como puede ser de índole religioso que relaciona la separación del

cuerpo y alma, tomando el alma como lo inmaterial y de cierta forma tratar de justificar la

existencia de un imaginario no material. O a veces se la simple acumulación de cosmovisiones

coloquiales y términos obsoletos y descuidados; por ejemplo, todavía se dice en el lenguaje


corriente “planeta” y hace ya más de un milenio se tiene conocimiento que los grandes

cuerpos esferoides que giran de diversos modos y a diferentes tiempos en torno al sol no son

platos. O lo inmaterial puede ser simplemente ¿un término imaginario que solo opera en la

mente pero que no forma parte de la realidad?, ¡nadie tiene la última palabra! Un caso

interesante de análisis es por ejemplo; La UNESCO el 5 de diciembre de 2012 declara un nuevo

Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad al “Tejido tradicional del sombrero de paja

toquilla ecuatoriano”, pero surgen varias dudas como, ¿Acaso el sombrero se teje solo?

¿Entonces las fibras del tejido están en nuestro imaginario? ¿Acaso la técnica y la elaboración

del sombrero se aprende solo escuchando?, entonces podemos replantear la pregunta ¿Qué

es lo inmaterial del patrimonio cultural inmaterial? O como diría Kenneth Hamma

“¿INMATERIAL YO?”.

Al analizar las interrogantes podemos concluir y afirmar parcialmente que, lo

inmaterial es un término imaginario que solo opera en la mente pero que no forma parte de la

realidad, es una categoría creada por “profesionales” que solo velan intereses clasificando,

jerarquizando y fragmentando el patrimonio sin bases teóricas lógicas y científicas que abalen

tales conceptos. No pueden tomar a la ligera la fragmentación del patrimonio por dualidad

porque si bien la UNESCO presenta un nuevo concepto de “Patrimonio Vivo” tendrían que

aplicar su misma lógica y presentar también un “Patrimonio Muerto”, no queda más que

avanzar con los estudios y replantear la clasificación del Patrimonio per se.
Ariel Salazar Romero (2342)

Profesor Patricio Noboa Viñan

Gestión del patrimonio cultural material e inmaterial 7 mo “A”

15 de mayo de 2018

¿Cómo el turismo puede ayudar a la conservación-protección del patrimonio cultural

material e inmaterial?

Para empezar hay que tener un enfoque de lo que es turismo en sí, planteado por

ejemplo por Organización Mundial de Turismo es “las actividades que realizan las personas

durante sus viajes y estancias en lugares distintos a su entorno habitual por un período de

tiempo consecutivo inferior a un año, con fines de ocio, negocios u otros”, entonces partiendo

desde el concepto tenemos claro que el turismo esta entrelazado con la cultura ya sea de

forma dicta como el aprovechamiento comercial o indirecta en el intercambio cultural entre

grupos sociales consecuencia de su desplazamiento. Aunque surge dificultades a la hora de

tratar de entrelazar l turismo con la conservación por el hecho de que la demanda no siempre

posee un “sentido de pertenencia” o interés en el cuidado o conservación, en su mayoría y

como dicta el concepto sus propósitos son más de ocio o negocio u otros.

El turismo como tal va a depender mucho de la modalidad que preste a sus

consumidores, el negocio turístico mayoritariamente tiene el afán de obtener beneficios

económicos por la prestación de sus servicios, empresas codiciosas que deja un lado el

ambiente, el respeto y la conservación para lograr sus cometidos, o a veces si utilizan la


naturaleza y los recursos que brinda la misma para desarrollar sus actividades pero de una

forma inconsciente, destructiva y contaminadora. Ahora con este enfoque del turismo en su

generalidad, de la única forma que puede aportar para una buena práctica que a su vez

conlleva a la conservación del patrimonio es ¡dejar de hacer turismo! con fines vagos de

diversión y empezar a fomentar la práctica de la apreciación y conservación creando una

conciencia colectiva del tesoro patrimonial de cada sitio a visitar y el orgullo de que más allá de

poder decir que existe el patrimonio simplemente, poder decir que es nuestro. El turismo

puede empezar moldearse como un turismo consiente tomando ejemplos como el

ecoturismo, el turismo comunitario que logra ser admirable por el mutualismo que se logra

apreciar de las personas con la naturaleza.

Podemos concluir que como en el turismo el actor más importante es el turista, él es el

principal eje de conservación de un patrimonio ya que él es el que lo visita, el que lo utiliza, el

que lo goza, por lo tanto hay que trabajar en el tema de conciencia siempre generando un

“sentido de pertenencia” para que el turista no se siente ajeno al patrimonio y sepa valorarlo y

acogerlo como suyo y por lo tanto lo conserve.

Potrebbero piacerti anche