UNIVERSIDAD ARTURO MICHELENA

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES

ESCUELA DE PSICOLOGÍA

SAN DIEGO, EDO. CARABOBO

PSICOLOGÍA SOCIAL

ENSAYO

HATED IN THE NATION

PROF. LIC. MIGUEL GALLARDO

ESTUDIANTES:

FERNANDO MONTENEGRO

WILFREDO GONZALEZ

SECCIÓN: 7N

MAYO, 2017
A modo de introducción

El planteamiento de un tópico que permita abordar el contenido teórico a partir de lo visto en

la serie resulta una tarea difícil. Y no sólo por referencia al enriquecedor contenido del capítulo
visto, sino por el amplio espectro de posibilidades que abre en sí el tema social y por supuesto
la psicología social, que es el tema que nos atañe.

No obstante, usando la cognición social y la influencia social como auténticos delimitantes del
abordaje, nos permitiremos hacer una aproximación interpretativa de la realidad social
manifestada en el capítulo seis de la temporada tres de la serie “The black mirror”. No se
pretende hacer un análisis exhaustivo de los elementos planteados en el mismo. El
procedimiento será encarar el tema de las redes sociales y la participación que estas tienen en
la dinámica social.

Por tanto no se analizarán los personajes ni mucho menos se valorarán las escenas, sino que
como un buen modelo, el capítulo, se usara como referencia de la realidad social que hoy se
vive con respecto a las redes sociales.

La Red

Resulta interesante que el diccionario de la Real Academia Española define la palabra red como
más de diez acepciones, dentro de las cuales parece ser una de las más completas; un conjunto
de elementos organizados para determinado fin. Parece ser más completa por la inclusión de
dos ideas fundamentales; elementos organizados, que hace referencia a la conjunción de
materiales como en el caso de la red de pesca o de personas en el caso de las redes sociales.
Por otro lado contiene la idea de que estos elementos organizados tienen un fin determinado.

Hablar de la sociedad humana es tocar una de las redes más complejas conocida por el hombre,
digna como lo ha sido y lo seguirá siendo, de grandes estudios y propuestas teóricas que buscan
comprenderla e iluminarla. Y aunque la sociedad en sí es una auténtica red, no se puede pasar
por alto una de las últimas inclusiones de la RAE en sus acepciones de red: Red social, esta
queda definida como una plataforma digital de comunicación global que pone en contacto a
gran número de usuarios.

En este sentido básico y muy específico, se puede afirmar que las llamadas redes sociales tienen
como objetivo hacer de la sociedad una red cada vez más conectada. Sin embargo, es evidente
que la sociedad al ser una red tan compleja, es impresionantemente susceptible a los cambios
que experimenta.
Es en este punto donde es oportuno hablar de la influencia de las redes sociales desde el
punto de vista normativo e informativo.

Tal y como se desarrolló en clases, la influencia informativa plantea la postura personal vs la

postura de la sociedad, en esta disyuntiva el individuo tiende a colocar más valor a la postura
de los otros por encima de la propia, propiciando un cambio en los juicios, pensamientos o
conductas en consecuencia.

En este tipo de influencia el individuo sede sus criterios personales a los planteados por la
sociedad, de alguna manera aliena su postura a la de los otros. En este sentido las redes sociales
tienen un impacto fundamental. Ellas son un canal casi infalible de comunicación global; por
ende aunque en sí mismas no son causantes de la influencia, se convierten un canal basto y
ampliamente difundido para la comunicación de la influencia, en este caso informativa.

Tanto es así que se ha denominado influencer a la persona que es capaz de llegar a más personas
en sus redes sociales. Cada uno de ellos tiene su propia forma de informar a la gente. Se puede
decir que las redes sociales fungen como un mercado conde eliges bajo que postura ser
influenciado.

La influencia Normativa, se comprende como el proceso en el que actúa un individuo pero sin
estar convencido realmente de su acto sólo para lograr estar en consonancia con el resto. Este
tipo de influencia es mas de carácter específico; en las redes sociales hay un sinfín de posturas
disponibles como para que cada quien seleccione con la que se siente cómodo, de allí que la
influencia normativa sigue siendo un aspecto de realidades más concretas como el trabajo o la
familia, se puede decir que este tipo de influencia requiere un proceso más concreto.

En este mismo sentido vale la pena tener en cuenta como la tecnología ha cambiado la
dinámica social.

El cambio fundamental se puede ver en términos de disponibilidad. Por Ejemplo, anteriormente

para acceder a la información (noticia) había que esperar el día, ir a la tienda, comprar el
periódico… hoy en día la noticia llega al momento, basta con desbloquear tu móvil y abrir
cualquier app de noticias para acceder a ellas.

Ates la comunicación requería de tiempo, escribir una carta, hacer una llamada, ahora con
cualquier app de comunicación puedes no sólo comunicar un mensaje, puedes hasta hacer una
video llamada. Por tanto la dinámica social se modificó fundamentalmente en términos de
agilización del proceso social. Algunos mencionan dentro de los aspectos negativos que la
comunicación se ha despersonalizado generando una especie de máscara virtual que impide el
contacto humano.

No obstante parece ser una postura equilibrada ver la tecnología como los que es en realidad,
una herramienta que es capaz de estrechar el entramado social humano, teniendo siempre
presente que el uso de la herramienta, como cualquier otra, depende del individuo.

Uno de los usos de esta herramienta llamada tecnología y más específicamente las redes
sociales, tiene que ver con la normalización de la conducta. Este punto está íntimamente
relacionado con la influencia informativa. La tendencia es a normalizar lo común, lo repetido,
un ejemplo de ello son los chalenges. Estos pasan a ser normales en la medida en que se hacen
virales marcando una tendencia que todos quieren repetir.

En un aspecto más complejo se puede decir que este proceso de normalización cuando toca
aspectos como la violencia, tocan la cognición social y se insertan en los esquemas cognitivos
que guían la conducta de la sociedad. La forma específica en que se puede evaluar este tipo de
influencia, tiene que ver con los heurísticos de disponibilidad, ya que la normalización
convierte en más accesible lo típico o común.

En el caso específico de la realidad venezolana, es complejo determinar si el proceso de

influencia es por conformidad o por obediencia. Habría que tener en cuenta que en el contexto
político hay dos grandes grupos que están influenciados cada uno a su manera.

En primer lugar están los que apoyan al gobierno, aquellos que aunque la situación está en el
punto de crisis en el que se encuentra, siguen viendo en la revolución chavista un camino para
continuar. Estos se pueden considerar influenciados desde la obediencia y una obediencia que
incluye expresiones como “aunque me muera de hambre, voto por Maduro”, Obediencia a un
líder que aun después de la muerte los sigue influenciando.

Luego están el gran bando de los que no apoyan al gobierno, estos se puede decir que están
influenciados por la conformidad, muchos llevados por los sentimientos de ira, rabia e
impotencia, encuentran en la violencia, normalizada por las redes, una forma de expresar su
descontento.

Aunque la pregunta no contempla el aspecto de las minorías, en este caso es oportuno hacer
mención al hecho que la teoría de la influencia social contempla como se puede dar el caso en
que las minorías influyan a la sociedad en cuanto a mayoría. Aunado a esto vale la pena rescatar
la idea de la tecnología y las redes como herramienta. Y es que en definitiva hay una minoría
que lucha por mantener una visión sana de la realidad, que no es vivir en un estado psicótico
de felicidad, sino que implica vivir con los pies en la tierra pero con la claridad de cuáles son
los pasos que verdaderamente llevan a salir de la crisis.

Esta minoría tiene estos aspectos a su favor para influenciar positivamente el entorno y
encontrar una verdadera salida a la crisis.