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 908080.30

|||||||||||l.
 DrccIoNARIo
º EO LOGÍA
Por EL ABATE BERGIER,
Doctor en esta sagrada facultad, Canónigo de París; de la Academia de las
Clemelas, Bellas letras y Artes de Besanzon; de la Real Sociedad de Namey,
y Confesor de la Real familia de Luis XV.
EDICION PRECEDIDA

del ELOGIO HISTóRICO DEL A UTOR por el BARoN DE SANTe-Caoix, y del PLAN DE LA
TEOLOGIA, manuscrito autógrafo de BERGIER;
ENRIQUECIDA
CON NOTAS ESTRACTA DAS DE LOS MAS CÉLEDRES APOLOGISTAS DE LA RELIGION,

PDR lll.ºº 3D JSS.3N, ARDBSPD D3 RBllS;

AUM 3:NA DA

con gran número de artículos nuevos intercalados en el testo por orden alfabético sobre los errores recien
tes, y una nomenclatura biográfica de los teólogos mas célebres y de sus obras teológicas desde el
-
siglo VIII hasta nuestros dias,
PoR M.ºº DoNEY, OBispo DE MoNTAUn AN y PoR oTRos SABIos DE LA FRANCIA,
1 varios articulos de Derecho canónico intercalados, que por su importancia ó conecsion intima con las materias teológicas se la º
creido conveniente insertar en esta edicion.

SEGUNDA VERSION EN CASTELLANO,

uecIIA Poru UNA socIEn An DE ECLEsIÁsTicos DE ESTA CoRTE,
BAJ0 LA DIRECCION DEL PRESITER) Y D0(T0R ). ANT0LIN M0NESCILL0,

enriquecida por el mismo con nuevos artículos y curiosas notas.

CoN PERMISO DEL SEÑoR vicARio ECLESIASTIco DE MADRID Y su PARTIDo.

—o------- o TOMO PRIMERO.

lll R.D. II): l Bd.7.

-es = 5, C >-

MPRENRTA DRL En TOR PROPIETAR10, D. PRIMITIyo FUENTES, PLAzu ELA DEL PROGREso, NuMERo 1.
 —-s- e 3e-e-

Adverteneias importantes.

Los artículos nuevos intercalados en el testo de Bergier se

distinguirán con este asterisco “
Las adiciones al testo del Baron de Sainte-Croix y de Ber
gier irán colocadas entre dos paréntesis, antepuesto el aste
risco * ).
Los artículos de derecho canónico, con que va enriquecida
esta edicion, llevarán delante esta 34
Las notas ú observaciones hechas por el presbítero y doctor
D. ANToLIN MoNEscillo, director de esta nueva traduccion, lle
varán, ademas de su llamada, esta Q S”
En el Elogio histórico de Bergier, Introducion y Plan de la
Teologia irán colocadas dichas notas ú observaciones al pie de
cada plana, mas en el Diccionario se pondrán al fin de cada ar
tículo las que le correspondan.

—-es- e 3e 3-e-

Esta mueva traducelon é impresion es propiedad de su Editor, y está bajo la pro

teeelesa de la lei para los efectos consiguientes contra el que la reimprima.
 II) INTRI)

03, E3A. 38.68.

P(DR 2, BARDA DE SAll - TR DIX 1.

ficolas silvestre Berger nació el 31 de diciembre de 1718 en Darney, la Lorena , en la parte

correspondiente á la diócesis de Besanzonº. Concluidos sus primeros estudios, se dedicó á la carrera
eclesiástica, y se retiró á Besanzon para aprovecharse de las lecciones de los doctos maestros que enseña
ban en esta ciudad. Sus adelantos hicieron que se distinguiera bien pronto de todos los demas. Cursó teolo
gía bajo la direccion de M. Bullet, conocido por sus muchas obras muy recomendables en defensa de la reli
gion, y tomó el grado de doctor en esta facultad. Conservó toda su vida un vivo reconocimiento y un tierno
afecto á este respetable profesor.
La reputacion de que gozaba ya le dió á conocerá M. Chiflet de Denne, consejero en el parlamento del
Franco-Condado. Este majistrado le confió la educacion de sus hijos, que merced al esmero de tan respeta
ble sábio, fue coronada con los mas brillantes resultados.
“En 174%, el abate Bergier, sacerdote y doctor en teología, hizo oposicion de un modo brillante á una cá
tedra de filosofía, que acababa de vacar en la universidad de Besanzón. En 17'5, se volvió á la capital.
El abate Bergier “acabó de perfeccionarse en Paris; pero el arzobispo de Besanzon no tardó en llamarle
á su diócesis. En 178, fue nombrado cura de Flangebouche, pueblo situado á seis leguas de Besanzon, cer
ca de Suiza. Llenó con el mas ardiente celo las funciones de pastor; amaba á sus feligreses como si fueran
hijos, y era correspondido de ellos. -

En su soledad, se dedicó con la mas constante aplicacion al estudio. Sus escritos manifiestan, que estaba
muy versado, no solo en el conocimiento de la teología, sino tambien en la literatura y cuanto caracteriza la
verdadera erudicion. Aprendió las lenguas antiguas y varias modernas, á fin de poder leer los orijinales. Te
nia por costumbre hacer un estracto de todos los libros en que se encontraban noticias relativas á las mate—
rias que trataba de profundizar. Se dedicó tambien á la historia natural, porque estaba persuadido de que
podria sacar de ella grandes ventajas.
Empezó á darse á conocer en la carrera de las letras tomando parte en los concursos académicos. La
academia de Besanzon propuso en 1752 dos medallas de oro, una para un discurso oratorio, y otra para una
disertacion histórica, y le fueron adjudicadas ambas. El modo de presentar en el año siguiente esta cues—
tion: La asiduidad en el trabajo puede reportar á la sociedad tantas ventajas como la superioridad de talen
to?, le valió el premio de la elocuencia; trató tambien, si no con una completa exactitud, al menos con eru
dicion y de una manera injeniosa, otra cuestion puramente histórica: se trataba de investigar el origen del
nombre de los Secuaneses, sus costumbres, su religion, forma de gobierno y límites del pais que habitaban antes
que Julio César hubiera conquistado las Galias, y en la época de esta conquista. En 1753, la academia de Be
sanzon le encargó formar una disertacion que fue aplaudida unánimemente por aquella. En 175, pronun—
ció delante de ¿ acadenia el panejírico de S. Luis. Diez años despues obtuvo el premio de discurso,
propuesto por la misma academia, acerca de esta cuestion: Hasta qué punto las costumbres ilustran al talento.
Sin querer, hizo una pintura de sí mismo). Publicó en seguida los Elementos primitivos de las lenguas, des
cubiertos por la comparacion de las raices del hebreo con las del griego, del latin y del frances, y el origen de
los dioses del paganismo, en el que se encuentra una traduccion de Hesiodo. Esta última obra es una continua
cion de su sistema sobre el orijen de las lenguas, sistema que Court de Gebelin trató de desarrollar y profun—
dizar en su Mundo primitivo. Pero todo el mundo sabe que el ridículo caracter de este, le hizo mezclar sus
descubrimientos con muchos errores. “Feller no encuentra el Origen de los dioses del paganismo ni la ló—
jica del abate Bergier, ni la marcha juiciosa de su vasta erudicion. El autor repudió en algun modo su obra
por el elojio que hizo en diferentes ocasiones de la Historia de los tiempos fabulosos, cuyo resultado le fue en—
º. Annales philosophiques, morales et littéraires, t. 2, p. 22. (Año 1800.
2) En el dia Darney forma parte de la diócesis de Saint-Dié.

301853
 VI
teramente contrario. Segun el testimonio de Barruel, decia altamente que el Sistema de la fábula esplicado
por la historia estaba mejor probado que el suyo, siendo preferible bajo todos aspectos.
En 176, época de la espulsion de los jesuitas del ¿ , el abate Bergier fue nombrado di
rector del colejio de Besanzon. «Si no hubiera sido por el rigor del clima y lo dificil que por esta misma causa
era el servicio, escribia en 1786, hubiera tenido gusto de morir enmedio de sus buenos feligreses de Flange
bouche.» La academia de Besanzon le asoció á sus trabajos en 1766). Acababa de dará luz ¿ deismo refuta
do por sí mismo contra el Emilio de J. J. Rousseau, obra que fue seguida inmediatamente de la Certeza
de las pruebas del cristianismo, contra el Earamen crítico de los apologistas de la religion cristiana. (Falsamente
atribuido á Frérel) º. Contestó despues á los consejos injustamente llamados razonables, en que se atacaba la
obra anterior. “Feller dice del Deismo refutado por sí mismo. «que el abate Bergier combate en élá.J. J. Rous
seau con sus propias armas, y que ¿ lo general no le opone mas que sus mismas convicciones, consignadas
en algunos otros pasages de sus obras. En esta obra maneja con el mayor acierto la comparacion del ciego
de nacimiento, para esplicar la relacion de nuestra razon con la naturaleza y las obras de Dios; prueba tam
bien la necesidad y la existencia de la revelacion, y el instrumento de que Dios quiere servirse para dárnosla
á conocer; combate la tolerancia, y justifica del modo mas completo la religion de los males que se le atri
buyen; demuestra la inutilidad y los falsos principios del nuevo plan de educacion trazado en el Emilio; enla
za el cristianismo con la política, y por último refuta de una manera victoriosa la Apologia de Rousseau
contra la pastoral del arzobispo de Paris». La obra insidiosa atribuida á Fréret, conocida ya hacia mu
cho tiempo en manuscrito, habia suministrado materiales á un gran número de libros impíos, antes
de darla á luz. En la Certeza de las pruebas del cristianismo, que le opuso Bergier, este último,
dice tambien Feller, «pone en evidencia la pasion y mala fe que con la máscara de moderacion pudie
ra disfrazarse, y sin arredrarse con ese conjunto enorme de razonamientos especiosos, los ataca en deta—
lle, demuestra la ilusion de cada uno en particular, desmoronando todo el edificio». Se hicieron
tres ediciones de esta obra en un año, que fue traducida al italiano y al español. Feller, al hablar de la Res
puesta á los consejos razonables, dice que «Bergier refuta los sofismas y sarcasmos de Voltaire».
Por último, el abate Bergier fue llamado de Besanzon á Paris.
M. de Beaumont, arzobispo de la capital, formó el proyecto de reunir en su cabildo eclesiásticos ¿ S62
hubiesen distinguido por sus virtudes y talentos, y principalmente los que estuviesen en estado de defender
la religion, que atacaban los incrédulos por todas partes. Para esto encargó á uno, á quien honraba con su
confianza, la formacion de una lista de los individuos mas idóneos para llenar este objeto, y entre los que pu
diera elejir cuando llegara el caso. El abate Bergier oeupó el primer lugar en esta lista. Poco tiempo despues
el arzobispo de Paris le nombró canónigo de su iglesia, remitiéndole direclamente sus despachos, acompaña
dos con una carta sumamente honorífica. Pocos dias antes habia recibido de M. de Concié, obispo de
Arras, los despachos de una canongía y la patente de provisor. Este prelado trataba tambien de reunir en
su diócesis y al lado de su persona eclesiásticos dotados de conocido mérito. Facilmente se concebirá lo inde
ciso que se encontraria el abate Bergier en esta circunstancia. Escribió á los dos prelados rogándoles que
decidieran entre sí, y le indicaran lo que habia de hacer, estando pronto á someterse á lo que quisieran de
terminar acerca de su persona. El obispo de Arras hizo presente al arzobispo de Paris, que habia sido
el ¿? que le habia nombrado; M. de Beaumont le respondió que el abate Bergier, colocado en Paris,
º ria ser mas útil á la religion. Por último, se decidió la cuestion á favor del arzobispo, y fue llamado á
a capital. Me he detenido en estos delalles, porque honran á la vez á los dos prelados y al abate Bergier.
Este, nombrado canónigo de la iglesia de Paris, el 11 de diciembre de 1769, se hizo amar y respetar
de sus compañeros, por la regularidad de su conducta, la simplicidad de sus costumbres y su modestia.
Dividió su tiempo entre el estudio y los deberes que le imponia su nuevo cargo. - -

Su permanencia en la capital le fue tanto mas agradable, cuanto que le proporcionaba la facilidad de
consultar las obras de que necesitaba. Ademas de las bibliotecas públicas tenia á su disposicion la del cabildo
de Nuestra-Señora, la del arzobispo y las de muchos amigos, que eran bastante complelas. • -

Habiendo formado hacia ¿ tiempo el plan de una gran obra para la defensa de la Religion, leyó
todo lo que pudo haber á las manos acerca de este objeto: leia con la pluma en la mano, formando estractos
de lo que le parecia importante, á fin de servirse de ellos cuando llegara la ocasion. -

En 1769 imprimió la Apología de la religion cristiana contra el autor del Cristianismo sin velo y al
gunos otros críticos. Esta obra es clara, sólida, instructiva y propia para convencer á cualquier entendimien.
to, siempre que no haya determinado cerrar voluntariamente los ojos á la luz de la verdad..." Es tan reco
mendable como las anteriores, porque está escrita con la misma precision, claridad y moderacion. «El autor,
dice Feller, combate en ella á Boulanger.... La continuacion de esta Apología ó refutacion de los principales
artículos del Diccionario filosófico, tiene una enerjía y laconismo admirables. El abate Bergier, volviendo
muchas veces sobre las mismas cuestiones, á las que le llaman frecuentemente sus adversarios, se pre
senta siempre armado con nuevas razones y autoridades; y aunque satisfaga siempre, es inagotable su afluen
-

peroa que
2. S" El celebre
respetaba literatopuesto
su nombre, La Harpe dice
que era que vivia
sabido en su ytiempo
por pocos, el verdadero
no teme autor
asegurar que no de
es esta obra
de Fró ret que corre.
y como ni comº
de º ¿
¿
sino de Damilaville;
cuestion atribuida a es la obraes titulada
Fréret, el Cristianismo
de Bourigny. Hasta aquisinlarelo. Los sabios
critica. adicionadores
En cuanto del Diccionario
á la obra misma, de Feller
lice, el abatº dicenºº
Genet, º e la ¿?
an
bona que su autor no ha consultado mas que a los modernos incrédulos, mientras que el abate Bergier, mas sábio en en =
tiguas que su adversario,
diado suficientemente ha bebido
la materia; se en
halas verdaderascon
precipitado fuentes
demasiade la
en antigüedad.
publicar su Yobra;
añade: el autor
ignora el arte eldeerámen critico
la critica ; l":etc; no ¿
tiene es nat
ni precision en el juicio: antes de juzgar debiera haberse instruido a menos en el arte de la critiea del protestantº Le Clerc, y razo
consecuentemente; a lo mas logró inponer a los ignorantes; pero nunca á las personas ilustradas.
 VIl
cia, oponiendo á la monotonía de los filósofos una fecundidad y variedad que forman un contraste poco ven
tajoso al talento, ó mas bien á la causa de sus adversarios), º
Poco tiempo despues, se dió á luz el libro titulado el Sistema de la naturaleza, que los partidarios de la
incredulidad le tuvieron por el mas á propósito para atacar por sus fundamentos á la religion. Esta produc—
cion, segun el juicio aun de personas medianamente instruidas, no era mas que un conjunto monstruoso de
principios falsos, de inconsecuencias, de absurdos y contradicciones; y muchos eran de parecer que ni aun si
quiera merecia una refutacion en las formas; pero con o el autor tenia un estilo artificioso, con un tono deci
sivo y picanle, y por otra parte habia una especie de trabazon en las partes que componian su sistema,
por estravagante que fuera, podia sorprendiendo, seducir á algunos talenios superficiales. El abate Bergier,
accediendo á los deseos de la asamblea del clero francés, emprendió la refutacion de este famoso libro. Al
hacerlo, justificó la idea que habian concebido de su celo y talento, destruyó hasta sus cimientos el sistema
tan preconizado por los incrédulos. Se imprimió su obra en 1771. En el primer volúmen, destruye el mate
rialismo, y en el segundo, justifica la religion y trata de la Divinidad, de las pruebas de su existencia de sus
atributos, y del modo con que influye en la felicidad de los hombres.)
No obstante esto, el abate Bergier, dió la última mano á su grande obra sobre la religion, "la que copió
tres veces por su misma mano, pues hasta tal punto llevaba la severidad para con sus obras. Consultó, an
tes de darla á la prensa, á aquellas personas que juzgó podian suministrarle nuevas luces; y rogó encarecida
mente á su censor, que era una persona muy instruida, no le hiciera ninguna gracia, sino que examinara con
todo rigor la obra, y no le dejara pasar nada que no estuviera arreglado á la mas rigurosa exactitud. Se im
primió, en 1780, en 12 vol. en 12.º con el título de Tratado histórico y dogmático de la verdadera religion.
Algunos criticaron el número de volúmenes; pero el que reflexione un poco sobre las consideraciones si
uientes, no dejará de convenir en su oportunidad. Primero. El autor ha reunido los principios esparcidos por
os impíos de todos los siglos, para formar de su doctrina una especie de cuerpo; ha discutido los argumentos
ue hacian á la religion, lo que exijía un estudio muy detenido. Segundo. Ha demostrado el origen de los
¿ errores de los enemigos del cristianismo; ha probado que los incrédulos modernos no son mas que
unos copistas de sus predecesores; que los incrédulos de Inglaterra dieron origen á los de Francia; que unos
y otros no han hecho mas que reasumir las objeciones de Celso, Porfirio y Juliano apóstala, á pesar de es—
iar refutadas mil veces de una manera victoriosa, entresacando de los antiguos hereges algunos sofismas en
contra de ciertos dogmas del cristianismo. Por último la obra del abate Bergier contiene la refutacion de to
das las objeciones que se han inventado contra la religion cristiana en todos los siglos. Júzguese por lo que
antecede, si el autor se ha escedido en el número de volúmenes.
“Feller dice de este tratado que es una obra llena de erudicion y rica en observaciones de todos géneros;
y añade despues: «Historia, física, geografía, política, moral, filosofía, erudicion sagrada, todo lo reune la
pluma del sábio, elocuente y juicioso autor, para formar un cuadro sencillo, respecto de su objeto princi—
pal, aunque infinitamente compuesto por la diversidad de relaciones y la multitud de partes que concur
ren á formar este precioso conjuntol.
Cuando se dió á luz la obra de que hablamos, trataron algunos de disputar al abate Bergier el méri
to de la invencion de su plan. Esto fue motivado por la siguiente circunstancia. El Sr. de Beaumont, arzo
bispo de Paris, invitó á uno para que compusiera una obra, que pudiera adoptar este prelado, dividida
en varias partes, y en forma de instruccion pastoral, para preservar á los fieles de los peligros de la in
credulidad. Concluido el trabajo, el autor le remitió al Sr. de Beaumont, sin darle la forma de instruccion
pastoral. El prelado se lo dió al abate Bergier para que lo leyera, y le digera su parecer. Este lo leyó é in—
formó del modo mas ventajoso, al devolvérselo al señor arzobispo. Llegando despues á oidos del Sr. de Beau
mont que se trataba de plagiario al abale Bergier, quiso saber á lo que debia atenerse. Encargó al abate
Chevreuil, canónigo y canciller de la iglesia de Paris, vicario general de la diócesis y antiguo profesor de la
Sorbona, persona bien conocida por sus virtudes y talento, que leyera los dos planes con atencion, y le dige
ra hasta qué punto era cierta la inculpacion del plagio de que se trataba. El abate Chevreuil contesió que se
habia ofendido sin razon al abate Bergier; que los dos planes eran diferentes; que no estaban calcados el
uno sobre el otro; que teniendo que tratar los dos autores las mismas materias, debian asemejarse bajo este
aspecto; pero que cada uno de ellos lo habia verificado del modo mas adecuado á su carácter; ademas que
el abate Bergier tenia dadas pruebas de su idoneidad, y no necesitaba de ser plagiario. Estos detalles se deben
á una persona bien instruida en el fondo de este asunto; y los hubiéramos suprimido, si no existieran todavia
personas que conservan cierta prevencion respecto del abate Bergier.
a < S. El Cristianismo sin celo no es de Boullanger, como ni el Sistema de la naturaleza es de Mirabaud, el traductor del
Tasso, y secretario de la academia francesa. En el dia se sabe casi generalmente, quién es el autor del Sistema de la naturaleza; pe
ro una vez que los mismos filósofos no han creido, aun despues de la revolucion , deber atribuir á su autor la autenticidad de este
infame libro; me creo obligado a la misma reserva por respetos á su familia a quien venero; y me regocijo de que, a pesar de la revo
lucion, sea el ateism o todavia tan despreciable y odioso que los mismos ateos temen , manchar la memoria de uno de sus cofrades
dando su nombre á esta o ra. Lº Harpe, cours de Literature Philosophie du XVIII siecle, Fracment sur Boullanger. El mismo crí
tiro en el lugar citado dice del Cristianismo sin telo. Esta declamacion estravagante y furiosa fue redactada por un hombre bas—
tante es r tro llamado Da mila ville.
En cuanto al Sistema de la naturaleza basta decir que fue calificado por Voltaire con estas palabras: «Una filipica contra Dios.»
He aqui ¿? de un hombre contemporaneo muestro, y nada sosnchoso : « Frecuentemente me he horrorizado y estre
mecio al leer el famoso, Sistema de la naturaleza. Estº largo encarnizamiento de un anciano por cerrar delante de si todo el porvenir,
esta insplicable sed de destruccion este entisiasmo contra una idea dulce y consoladora, me parecian un estravagante delirio.» Ben
jamin tant-Erience du sentimen religieur dans le caeur de l'homme. Véase La Raison du Cristianisme, t. 3. edition de
P2 ris 8:36.
Leanse en refutacion del Sistema de la naturaleza y contra el Eramen critico 'e los Apologistas de la religion, los preciosos en
say es que con el titulo de Religio Victria, y como para servir de couplemento á la rica obra De fundamentis Religionis, escribió el
sábio y erudito Valseechi.
 VIII
En aquella ocasion buscaban en la corte á un sugeto que estuviera en estado de dirigir la conciencia de
algunos príncipes y princesas de la sangre real; pero querían un eclesiástico á la vez virtuoso, ilustrado,
esento de ambicion, enemigo de las intrigas, y que se limitara únicamente á las funciones espirituales de
su ministerio. Consultaron para esto con el Sr. de Beaumont, que indicó al abate Bergier. Por lo tanto
fue nombrado confesor de las señoras tias del rey, del hermano de este y su muger. ºrnio que fi
jar su residencia por la nueva posicion en Versailles el abate Bergier, amigo de guardar la regla, pre
sentó al arzobispo la dimision de su canonicato; pero el prelado, á instancias de su cabildo, no quiso ad
mitirla. Es preciso no olvidar un rasgo de desinteres de que dió muestras poco tiempo despues. El her
mano del rey dijo al obispo de Séez, encargado del nombramiento de los beneficiados de su principado.
que tenia intencion de dar una abadia á su confesor. El abate Bergier rehusó esta gracia diciendo que
era bastante rico; tan solo añadió, que podia descargarse el Estado de su sueldo, dándole una pension
eclesiástica equivalente; pero que tampoco aceptaria nada que yaliera mas que esto. "Si gozó de dos
pensiones, de á dos mil francos cada una, la primera, sobre un beneficio, concedida por Luis XV, y la
segunda por la asamblea del clero de Francia, fue porque habian sido solicitadas sin su conocimiento.
Obligado á residir habitualmente en Versailles, no por esto dejó de vivir retirado y entregado al estudio.
No veia mas que á algunos amigos, de los cuales la mayor parte eran literatos. Tenia gusto en pasearse
solo y sin libros; entonces recordaba sus lecturas anteriores, arreglaba sus ideas, y las digeria y clasificaba,
á fin de poner cada cosa en su lugar y con la claridad conveniente.
No obstante, jamás olvidó que era canónigo. Para llenar en cuanto fuera posible los deberes anejos á
su beneficio, iba con frecuencia á Paris, donde pasaba muchos dias, y durante este tiempo asistia, por lo
general, á los oficios. Nunca quiso que se le tuviera como presente en los oficios á que no asistia, á pesar
de que su plaza le daba el derecho de disfrutar este privilegio. “Era tal su desinterés, que amenazada su
fortuna por la revolucion, escribia el 19 de noviembre de 1789: «Aunque estoy en vísperas de sufrir una
pérdida considerable, tanto en mis sueldos como en lo que se me debe, no lo siento mas que por no poder
asistir, como hasta aqui á los desgraciados»).
Se formó el proyecto de reimprimir la Enciclopedia en Paris en volúmenes en l.º, y seguir un or
den mas metódico. Los directores de la empresa propusieron al abate Bergier, que se encargara de la par
te teológica. Costó mucho trabajo el conseguir que lo hiciera; porque temia no dejaran en la nueva edicion
algunos lugares que habian, desacreditado la primera á los ojos de personas muy afectas á los verdaderos
principios, y sobre todo á la religion. Pero despues de las mas vivas instancias por parte de muchos ami
gos suyos, accedió á lo que se le proponia, con la única mira de hacer un servicio á la religion, ofreciendo
al público la parte teológica, la mas importante del Diccionario, redactada con la mayor exactitud y purga
da de los errores que habian diseminado en ella. Pero cuál fue su sorpresa, cuando se puso á trabajarl Se vió
obligado no solo á corregir los artículos defectuosos, sino á formarlos casi todos de nuevo: los primeros au
tores se habian valido de obras muy sospechosas, y con frecuencia habian seguido á los autores protestantes
en la esposicion de los dogmas católicos. El abate Bergier no retrocedió á la vista de tantos obstáculos: se
hizo con los libros mas recomendables y con los monumentos y originales mas auténticos: cuando tenia algu
na duda consultaba con las personas mas ilustradas, á fin de no adelantar nada que no fuera exacto en un
todo. A los antiguos artículos añadió otros muchos enteramente nuevos. Por último se dió á luz la obra en 3
volúmenes en l."
“Feller, encuentra en ella, en general, la vasta erudicion, lógica rigurosa, el estilo corriente, rápi
do y fácil de las demas producciones de Bergier; «pero en algunos puntos, se encuentra, asi como en el
Tratado histórico y dogmático, demasiada indulgencia ó complacencia respecto de los individuos, pertene—
cientes á una secta que no desdeñaba su talento, una especie de tolerancia para con los errores acreditados,
y de compasion con algunas preocupaciones dominantes. A veces parece oirse á la voz de la religion , que
con tanto acierto ha defendido, decirle con un tono cariñoso y de queja: Tu quoque, Brute. Tambien es
verdad que la colaboracion de Bergier en la Enciclopedia ha contribuido poderosamente á estenderse una
obra perniciosa, vasto depósito de errores de todos géneros, á los que los lectores cristianos tenian la mayor
aversion, y que desde el momento que salieron bajo la egida del nombre de un autor tan sabio y religioso,
se la hizo un lugar en las bibliotecas mas escrupulosamente selectas. a Pero este paso imprudente, que dió
engañado por su celo, no impedirá que sea considerado conjusto título como uno de los mas celosos apolo
gistas modernos del cristianismo». •

Este juicio de Feller es muy severo. Como quiera que sea , de lo que antecede, nada se puede deducir.
que sea contrario al Diccionario de Teologia que se publica en el dia disladamente, con las intercalaciones
que le hacen justicia, con esos errores acreditados y preocupaciones dominantes de que habla el rigoroso
crítico.
Al principio de la asamblea constituyente, el abate Bergier imprimió, pero sin poner su nombre, una
disertacion acerca de una cuestion que se agitaba entonces con el título de Origen de la autoridad.
Poco despues, se alteró la salud del abate Bergier, hasta el punto de impedirle continuar sus estudios.
estuvo algun tiempo enfermo, y murió en Versailles, el 9 de abril de 1790 -

Añadiremos tan solo algunos otros detalles, para dar á conocer todavia mejor al abate Bergier.
º «SS Tan exacta es la observacion de Feller sobre este particular que algunos hombres respetables de su tiempo manifes
taron gran pesar de que el abate Bergier se asociase á una turba de escritores sin probidad, sin conocimientos ni a un ideas fijas; en
cuya prueba téngase presente que su mismo gere los llamaba: «Una raza detestable de operarios que, sin saber nada y Jactándose
« de saberlo todo , intentaron sobresalir por una universalidad desesperante, lanzándose solore todo, embrollándolo y manchándolo
atodo; y metiendo su enorme hoz en la mies agena».
 lX

Trabajaba por lo menos ocho horas al día, aun en los años últimos de su vida. Hablaba poco, á no ser con
sus amigos. Si la conversacion recaia sobre materias interesantes, se animaba, y se le veia tal cual era.
La variedad de sus conocimientos y la estension de su erudicion tan solo se manifestaban en sus obras. Nin
guno mejor que él ha poseido el arte de desenredar los sofismas del error, desenmascarar los artificios, y
echar por tierra las consecuencias. Unia á una lógica irresistible la claridad en las ideas. Aunque su es—
tilo era sencillo y natural, á veces iba acompañado de fuego y enerjia. La fuerza de sus razonamientos no
dejaba ningun recurso á las sutilezas de los incrédulos; á, no ser que quisieran cerrar los ojos á la luz de
la razon." («Lo que distingue principalmente al abate Bergier, dice Feller, lo que forma el caracter esclu
sivo de sus obras y con especialidad en las apologias de la religion, es esa lógica de una ¿º y vi
gor admirables. Apenas nos parece creible que se puedan reunir mas conocimientos en diversas mate
rias, y particularmente en la historia, la teología y la crítica. En el género de argumento llamado retor
sion es en el que Bergier sobresale con especialidad; comunmente consumaba con él su triunfo. Apenas habia
rechazado los ataques de los adversarios del cristianismo, cuando los atacaba en sus mismas trincheras y
con sus propias armas, vueltas contra ellos con una celeridad y destreza que admiran al lector, y po
niendo, por decirlo así, á la religion fuera de la arena, colocaba en ella al filosofismo y le aterraba
con sus dardos. «Este juicio de Feller, nos parece mas fundado que el de M. Picot, por otra parte tan juicio
so, el cual ha dicho de Bergier 1: «Que era un hombre instruido, laborioso, sencillo y modesto. Sus escri
tos son sólidos y recomendables; acaso no les falta otra circunstancia para que fueran mas útiles que el ser
mas reducidos, y escritos de un modo mas atractivo.»
Dos soberanos Pontífices, dignos apreciadores del mérito del abate Bergier, le dirigieron Brebes de
congratulacion que sorprendieron su modestia; y muchos soberanos le enviaron sus retratos en miniatura,
acompañados de cajas y medallas de oro, testimonios de estimacion de que se admiraba sencillamente este
venerable sacerdote porque no comprendia que su nombre pudiera ser conocido en el estrangero).

(933éA3

IIIIIIIIIIIII.
1." Discurso premiado en 1763 por la Academia de Besanzon, acerca de la cuestion siguiente:
Hasta qué punto las costumbres ilustran el talento, en 12.” . - º - 4 - -

2 º "Diez años antes habia obtenido el premio de la disertacion en la misma academia. "(Tambien le die
ron otros muchos, y ya hemos indicado arriba las cuestiones que trató con el mejor éxito).
3.ºº La
Loscerteza
elemenios
de primitivos
las pruebasdedellascristianismo,
lenguas, 1764ó Refutacion
en 12” º del Examen crítico de los apºlogislas de la
º lº -

religion cristiana, 1767, en 12.° Se hicieron muchas reimpresiones. (La publicaremos en castellano forman
do parte de la segunda série de la BIBLIOTECA ECLESIASTICA, agregando á esta obra la de la Respuesta á
los consejos razonables. Un tomo de unas 280 páginas; costará en Madrid seis reales en rústica y siete en las
provincias).
5.º Respuesta á los consejos razonables, relativos á la obra anterior, en 12.” Se ha unido á las nuevas -
ediciones de la Certeza. - - - -

6 º Respuesta a la carta inserta en la Compilacion filosófica, con motivo de la obra intitulada: La certeza
de las pruebas del cristianismo, en 12.” a - - 4. -

7 º "El deismo refutado por sí mismo, ó Ecámen de los principios de incredulidad esparcidos en las
obras de J. J. Rousseau, 1766, en 12.° Se habian hecho cinco ediciones antes del 1772 (La publicaremos
en castellano formando parte de la segunda série de la BIBLIOTECA ECLESIASTICA, ilustrada, cºn curio.
sas notas por el P. M. Fr. Nicolás de Aquino. Un tomo de unas 550 páginas; su precio en Madrid doce
reales en rústica y catorce en las provincias).
(1) Mem. pour servir á lº hist. eccl.t. h. p. 510.
a Q35" Este opusculito, en el que se encuentran
rofundas reflexiones sobre el º unido á, los estudios de Bonald,
de Wiseman y de M. Dupanloup, debieran encontrarse en a Biblioteca de todos los amantes de estudios filológicos
romo 1.
 X

8." El origen de los Dioses del paganismo y el sentido de las fábulas, con una esplicacion seguida de las
poesias de Hesiodo, 1767, 2 vol. en 12.° Se hizo una segunda edicion en 177.
9.º Apologia de la religion cristiana, contra el autor del Cristianismo sin velo, y contra algunos
otros críticos, 1769, 2 vol. en 12.° Se hizo una segunda edicion en 1770. La publicaremos en castellano
formando parte de la segunda série de la BlBLIOTECA ECLESIASTICA. Un tomo, 15 rs. en rústica en Ma
drid y 18 en las provincias.
10. Earámen del materialismo ó Refutacion del Sistema de la naturaleza, 1771, 2. vol. en 12.º
11. Tratado histórico y dogmático de la verdadera religion, con la refutacion de los errores que han sido
lanzados contra ella en los diferentes siglos, 1780, 13 v. en 12.º a.
12. Diccionario teológico formando parte de la Enciclopedia, 1788 y siguientes 3 vol. en l.º
13. Origen de la autoridad, impreso anónimo en 1789, en 12."
* (1. Discursos sobre el matrimonio de los protestantes, 1787, en 8."
15. Observaciones acerca del divorcio, obra póstuma, 1790, en 8.” Es la respuesta á un escrito
¿? á los individuos de la Asamblea constituyente para aprobar un decreto que autorizara el
ivorcio. b
16. Cuadro de la misericordia divina; obra tambien póstuma, impresa en Besanzon en 1821, y muy
propia para inspirar á las almas tímidas una confianza en Dios, en que el autor saca las razones de la
Escritura Santa.
17. Earámen del sistema de Bayle sobre el origen del mal. Observacion acerca de esta cuestion;» Si la fé es
contraria á la razon.» Objecion. Disertacion sobre el Santo—Sudario de Besanzon. Un manuscrito del abate
Bergier sobre la Redencion ha sido enviado por el abate Dupré, que era el depositario, á M. Asselino,
obispo de Bolonia. Plan de la Teologia. Obras ¿ impresas en Besanzon en marzo de 1831. Esta
última se ha unido á la edicion del Diccionario de Teologia publicado en 1838). o S" Tambien se ha
en dos de las que tenemos presentes para esta traduccion, ambas de 1844, una de Lille y la otra de
6Sl 700.

"(Barbier atribuye al abate Bergier los Principios de metafísica, impresos en el Curso de estudios para
el uso de la escuela militar).
a 2 S" Esta obra notable por su fondo, por su universalidad, por su erudicion y por las sábias aplicaciones que en ella
se hacen ya á la ¿ de los errores, y ya á sus consecuencias sociales y politicas, puede considerarse como una de las prin
ipales apologías del cristianismo, y como un variado, arsenal de las armas mejor templadas para defender el santo alcázar de la
Religion.-Le está imprimiendo en castellano el editor de este Diccionario, y formará dos tomos cómo los de la presente obra.
profundo vizcondeSon
de dignas
bonaid,deformarian
meditarsetodo unobservaciones,
estas gran libro" que unidas al Ensayo
y sobre, el divorcio en el siglo
9. XIX,» escrito p
por el

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mesignio de la Providencia en el establecimiento de la religion: erigen y pro

gresos de la incredulidad.

S. I.
39os, dicen los Padres de la Iglesia, enseña al género humano del modo mas conveniente para sus
diferentes edades ; como un padre tierno, tiene presente el grado de capacidad de sus hijos; hace ca
minar la obra de la gracia, al mismo paso que la de la naturaleza, para denotar que es el autor de una
ãootra. Tal es el principio de que se debe partir para concebir el plan que la Sabiduria elerna ha segui
al prescribir á los hombres la religion.
Este plan contiene tres grandes épocas relativas á los diversos estados de la humanidad. En los siglos
próximos á la creacion del género humano, en esa especie de infancia, no existia otra sociedad que la
de las familias, ottas leyes que las de la naturaleza, ni otro gobierno que el de los padres y ancianos. Dios
reveló á los patriarcas una religion doméstica, de pocos dogmas , de un culto sencillo y una moral, cu—
yos principios habia ya grabado en el fondo de los corazones. El jefe de la familia era el pontífice nato
de esta religion primitiva. Emanada, de la boca del Criador, debia pasar de padres á hijos, entre las
lecciones de la infancia. La tradicion doméstica, las prácticas del culto cotidiano, la marcha regular del
universo y la voz de la conciencia, todo contribuia para enseñará los hombres á no adorar mas que á un
solo Dios. Este primer lazo de la sociedad, unido á los de la sangre, era bastante poderoso para reunir las di
versas ramas de una misma familia, y para formar insensiblemente asociaciones mas estensas.
La idea primitiva de la religion que acabamos de manifestar no es de nosotros, es sacada de los libros
santos. El Eclesiástico, despues de haber hablado de la creacion de nuestros primeros padres, añade. «Los
» colmó de la luz del entendimiento, les dió la ciencia del espíritu; llenóles el corazon de discernimiento,
» y les hizo conocer el bien y el mal. Acercó la luz de sus divinos ojos á sus corazones, para hacerles co
»nocer la magnificencia de sus obras: á fin de que alaben á una su santo nombre, y ensalcen sus maravi
»llas, y publiquen la grandeza de sus obras. Les señaló reglas y costumbres, haciéndolos depositarios de la
» ley de vida. Hizo con ellos una alianza eterna, y dióles á conocer su justicia, y sus preceptos. Vieron con
» los propios ojos la grandeza de su gloria, y la magestad de su voz hirióles los oidos, y les dijo: Guar—
» daos de toda suerte de iniquidad. Y mandó á cada uno de ellos el amor de su prójimo º».
Pero la religion revelada por Dios, es un yugo que soporta el hombre con dificultad; si no se atreve á
sacudirle enteramente, trata de hacerle menos incómodo. La negligencia de los padres, la indocilidad de
los hijos, los celos, el interés, el temor, pasiones tumultuosas y suspicaces, hicieron que se interrumpieran
poco á poco las prácticas del culto comun y se olvidara la tradicion doméstica. El hombre forjó tantas divi—
nidades cuantos seres existen en la naturaleza; no se guió mas que por su capricho en el culto que las ren
dia. Bien pronto hubo tantas religiones como pueblos º; cada uno queria tener sus dioses tutelares. Esta fa
tal divisiones una de las causas que han retardado mas los progresos de la civilizacion.
(1) ¿ertul 1 de Virgin. velandis, c. 1; S. Ag. 1.
orat., 10.
de vera Relig, c. 26 et. 27, etc. Theodoret. Haeret. Fab, 1. 3, c. 17; de Provid
2 Eccl., c. 17, y.5 y sig.
a S. La razon humana entregada á si misma no podia menos de andar errante en sus concepciones; y asi como con las
docilidad y el respeto a la divina revelacion y á los fieles depositarios de las enseñanzas eternas, se habria conservado el precioso te—
soro de la ley santa y civilizadora, el , desvio criminal de los hombres produjo necesariamente los errores mas groseros y los culto
vergonzosos en que se simbolizaban los vicios y delitos, que un sentimiento de pudor no permite recordar. A tanto llegó el abomi
nable desorden de la idolatria que empezando por limitar el dominio universal del Altísimo, denominándole El Dios, de los hebreos,
se acabó por adorar á los animales, reptiles y plantas; aun se divinizaron los objetos detestables que representaban las infamias y la
prostitucíon. Y para decirlo de una vez y con la voz elocuente de Bossuet «Todo era Dios menos Dios mismo; y el mundo que Dios ¿º
ºbia criado para manifestar su poder, pareció convertirse en un templo de idolos ». Los que en nuestros dias sacuden lo que llaman
yugo de la autoridad, se engañan torpemente buscando la civilizacion en otros principios que en los del cristianismo. Los sacrificios, la
abnegacion, el amor, el perdon de las ofensas, la reconciliacion verdadera, las grandes virtudes y hechos heróicos que forman las dia
rias páginas del apostolado católico, están muy lejos de proceder del inicionado germen que el orgullo del hombre deposita en sus fu
gaces y quiméricos sistemas, ¿Y podra ofrecerse un tipo social en que no figuren como indispensables aquellas virtudes?
Cuando los apóstoles de la revolucion, que se llamaba reforma, intentaron alucinar al mundo prometiéndole una regeneracion pas
mosa, empezaron con protestas, y concluyeron levantando cadalsos y famosos trofeos de sus conquistas, Estas lecciones se han perdi
do en gran manera: y como si el mundo en el tiempo de la ley de gracia, pudiera aspirar con gloria a los dias infaustos del paganis
mo, no recuerda que queriendo prescindir de la revelacion y de la autoridad de la Iglesia, todo lo adopta como indiferente, todo para
él es religion, todo es sacerdocio y todo pontificado. De toda teoria se pretende hacer una creencia, una religion, un simbolo: al autor
de un sistema se le considera como redentor de la humanidad oprimida, y con tal de que la religion católica no entre en la combina
cion, todas las invenciones son buenas, tolerables, hasta santas, como la independencia del pensamiento. Todo en fin es religion menos
la religion misma.
De la protesta pues se caminó á la rebelion: y aun en el orden natural del horrible progreso de las ideas se guardó en el princi
pio, y conserva en nuestros dias esta nefanda y descendente rrogresion. La razon universal y soberana, la razon individua inviolable
el sensualistuo despues, luego la organizacion, las dimensiones cerebrales, la vida de vegetacion, la materia, el caos, la nada Hé aqui
la historia de las divinidades ante cuyas aras se postra el orgullo del siglo y toda la noble independencia, de esa generacion humanita
rio-civilizadora. Con razon, pues, podemos decir á sus apóstoles. Ah! escribis para la humanidad y repudiais la moral santa del Evan
gelio; predicais porvenir y dais lecciones de relajacion y decrepitud; quereis levantar la sociedad, y sembrais el recelo, la desconfian
za y la cizaña en la familia; arrojais proyectiles, y quereis atesorar preciosidades. No retardeis la civilizacion en vez de acelerarla, no
dividais la sociedad: respetad la familia porque está escrito. Que el que siembra vientos, «oge tempestades. Que el reinº dividido sae
rá desmoronade.
 XII
S. ll.
Despues de muchos siglos se reunieron un gran número de hombres, empezaron á seguir leyes y usos
comunes, á formar un pueblo, una república, un reino. Pero estos pueblos nacientes, desconfiando siempre
unos de otros, permanecieron en un estado de guerra; no se acercaban mas que para despojarse y aniqui
larse entre sí; todo estrangero era considerado como enemigo. Sumerjidos en el error, ¿cómo habian de
correjirse? ¿cómo hacer revivir la revelacion concedida á nuestros primeros padres? Dios comunicó á los he
breos una relijion nacional, enlazada con las leyes y con la constitucion de su república, ó mas bien destinada
áfundarla. Relativa al clima, al genio de esta nacion, á los peligros de que estaba rodeada, habia sido hecha,
no para un pueblo ya civilizado, sino que iba á serlo. Es preciso, pues, considerarla con relacion al interés
político y á la utilidad nacional, para conocer la sabiduria que encierra, y estimar el tiempo de su duracion.
Tal es tambien la idea que nos dá de ella el mismo autor sagrado: «A todas las naciones, dice, seña
»ló quien las gobernase; mas Israel fue visiblemente reservado para herencia de Dios. Todas sus obras
»están patentes como el sol en la presencia de Dios, cuyos ojos están siempre fijos sobre sus procederes. Ni
» por sus maldades quedó oscurecida la alianza divina, y todas sus iniquidades están á la vista de Dios.»
El hombre se habia estraviado adorando, como dioses las diferentes partes de la naturaleza; y esta se
desorganizó mediante el poder de Dios, para dará conocer á los hombres que era el Señor de ella. Átemori
zó á los ¿ cananeos, asirios y hebreos, con prodijios de terror. Yo ejerceré, dice, mis juicios sobre
los dioses del Ejipto; manifiesta que hace milagros, no solo para los hebreos, sino para enseñar á todos los
pueblos que él es el Señor. Con efecto, los hizo á la vista de las naciones que mas figuraban en el mundo co
nocido. Dios no reveló nuevos dogmas, pero anunció nuevos designios. La creencia de Moises y de los
hebreos era la misma que la de Adan y de Noé; el Decálogo es el código moral de la naturaleza: fue
conservado el culto antiguo, pero Dios le hizo mas estenso y solemne; en una sociedad civilizada era nece
sario un sacerdocio; la tribu de Leví fue elejida con esclusion de las demas. La tradicion nacional era el
oráculo que los hebreos debian consultar; siempre que se apartaron de ella, cayeron en la idolatria; desde
el momento que fraternizaron con sus vecinos, contrajeron sus errores y vicios,
Mas Dios no permitió que ignorasen lo que habia resuelto hacer en los siglos sucesivos. Por boca de los
profetas anunció la vocacion futura de todas las naciones á su conocimiento y culto. La relijion judáica no
era mas que un preparativo para la revelacion mas ámplia y general, que Dios queria dar, cuando el gé
nero humano fuese capaz de recibirla. S
. III.

Llegó el tiempo en º el Hijo de Dios vino á anunciar, bajo el nombre de Evangelio ó buena nueva,
una religion universal. La revelacion anterior tenia por objeto formar un reino ó una república sobre la
tierra: Jesucristo anunció el reino de los cielos. Una gran monárquia habia avasallado á todas las demas; to
dos los pueblos civilizados eran súbditos del mismo soberano. Las artes, las ciencias, el comercio, las con
quistas, las comunicaciones establecidas, habian por fin dispuesto á los pueblos para fraternizar y reunirse
en una sola Iglesia. El Hijo de Dios envia á sus apóstoles á predicar el Evangelio á todas las naciones. «For
maré, dice, un solo rebaño y un pastor 2.» Si este designio no hubiera sido concebido en el cielo, seria lo
mas bello que se hubiera formado sobre la tierra; y si Jesucristo no fuese Dios, seria el mejor y el mas
grande de todos los hombres.
Estos eran mas ilustrados y menos estúpidos que en los siglos pasados; asi los signos de la mision del
Salvador no iban acompañados de prodigios de terror, sino caracterizados por la bondad. Las costumbres
eran mas suaves, pero mas voluptuosas; era preciso, pues, una moral austera para corregirlas. Una filosofia
curiosa y atrevida no habia dejado subsistir ninguna verdad; era tambien necesario que hubiera misterios
para confundirla y reprimir sus ataques. Los usos de la vida social habian adquirido mas decencia y digni
dad; de aqui la necesidad de un culto noble y magestuoso. Los conocimientos circulaban de una nacion á
otra; la tradicion universal ó el catolicismo era la base sobre que debia fundarse la enseñanza. Tal es con
efecto, la constitucion del cristianismo.
El considerarla como una religion nueva, aislada, sin relaciones, sin títulos ni antecesores, es no co
nocerla. Este caracter es la ignominia de sus rivales; asi llevan sobre sufrente la señal de reprobacion. El
cristianismo es el fin último de un designio, formado desde ab oeterno por la Providencia, la terminacion de
un edificio empezado en la creacion; ha ido adelantando con los siglos, y no se ha presentado hasta el mo—
mento en que el artífice le ha dado la última mano. Los apóstoles nos dicen que el Verbo eterno que ha ve
nido á instruir y santificar á los hombres, es el mismo que los ha criado 5; San Agustin, en sus libros de
la ciudad de Dios, compara la verdadera religion á una ciudad santa, teniendo principio en la creacion, y
no debiendo concluirse hasta que todos sus habitantes se hallen reunidos en el cielo.
Este plan sublime no puede ser parte del espíritu de un hombre; abraza toda la duracion de los siglos:
los mismos que en las primeras edades concurrieron para su ejecucion, no la conocian. Jesucristo es el que
nos la ha revelado. San Juan, al empezar su Evangelio, y San Pablo en su carta á los Gálatas y en el primer
capítulo de la epístola á los hebreos, la desarrollaron con toda claridad. El cristianismo es la religion del
sabio, del hombre que ha llegado á la edad viril y madurez perfecta 4.
se". ¿ 14 y sig Traduccion de Amat. 2) Fiet unum ovile, et unus pastor Joan. c. 10, y . 16. a Joan. c. 1; Heb. c. 1.
 XIII

El autor del Eclesiástico, que ha presentado tan bien las dos primeras épocas de la revelacion, no pudo
describir la tercera ; fue anterior á ella mas de doscientos años; pero suplica y pide á Dios que cumpla sus
promesas y las predicciones de los antiguos profetas: «Llena, dice, á Sion de tus oráculos ó palabras inefa
«bles y á tu pueblo de tu gloria. Declárate á favor de aquellos que desde el principio, desde Abraham son
«criaturas tuyas escogidas, y verifica las predicciones que anunciaron en tu nombre los antiguos profetas 1.»
S. IV.
Un signo no equívoco de la obra divina es la constancia y la uniformidad; este carácter brilla en la na—
turaleza, asi como en la religion. Dios no ha enseñado á los hombres en un tiempo lo contrario de lo que les
habia dicho en otro; mas en ciertas épocas les ha revelado verdades que hasta entonces no les habia ense
ñado. La creencia de los patriarcas no fue alterada por las lecciones de Moises; el símbolo de los cristianos,
aunque mas estenso, en nada se opone al de los hebreos. El código, moral dado á. Adan se encuentra en el
decálogo ; este fue renovado, esplicado y confirmado por Jesucristo; pero la religion perfecta é inmutable
desde su origen, porque es la obra de la Divina sabiduria, ha sido desfigurada muchas veces por la cegue—
dad y las pasiones del hombre. Dios no cambia; el hombre varía, continuamente. Cuanto mas olvide y des
conozca las lecciones de su Criador, mas necesita que este padre sabio y bueno las renueve y haga mas
estensas y palpables.
En los estravios del hombre nada hay de uniforme; la verdad es una; los errores cambian hasta el infi—
nito º; un pueblo niega lo que otro afirma, las opiniones de un siglo son rechazadas por las del siguiente.
Unas veces los filósofos han enseñado que hay tantos dioses como seres en la naturaleza, y otras, que no existe
alguno. En una época, han confundido la Divinidad con el alma del mundo; en otra han creído que Dios
era el artífice del mundo, pero que no se mezelaba en su gobierno. Unos nos han concedido un alma, otros
la han negado; aquellos combatian por la libertad humana , estos por la felicidad; tal secta creia en la vida
futura, otras no la daban crédito. Los mas antiguos enseñaron una moral bastante pura; sus sucesores la
corrompieron ó minaron por los cimientos. En todo el ámbito del mundo se razonaba sobre la religion ; en
ninguna parte se atrevian á tocarla por temor de empeorarla. El pueblo seguia á ciegas las huellas de sus
conductores y la tradicion de sus antepasados; las fábulas y contradicciones lo desordenaron todo.
En medio de esta noche profunda, brilló un rayo de luz en un rincon del universo; aparece en él una
religion pura; desciende por línea recla del primer hombre, por consiguiente del Criador; se ha perpetuado
en ina sola rama de las familias sucesivas. Cuando estaba próxima á estinguirse, Dios aparece de nuevo y
se hace oir; habla como Señor soberano de la naturaleza; los hebreos admirados tiemblan y escuchan en
silencio. Era necesario separarlos de las demas naciones abandonadas al error, y sujetarlos por una ley severa.
Veinte veces tratan de sacudir el yugo, y otras tantas se ven forzados á admitirle. Cuando parecian mas su
misos, trastornan los dogmas, corrompen la moral y alteran el sentido de las promesas divinas. Dios, no
obstante, es fiel para cumplirlas: en la época marcada de antemano, su Verbo encarnado se presenta entre
los hombres, revestido con todos los caracteres de la divinidad. Anunciado por los profetas, esperado por
los justos, precedido por los prodigios, nacido de la sangre mas noble ¿ hubo en el universo, recibe el
nombre de Salvador; admirable por su doctrina, imponente por sus milagros, respetable par sus virtudes,
amable por sus beneficios, predica el reino de los cielos. Pero es una luz que alumbra en las tinieblas: es
desconocido, despreciado y condenado por la nacion misma que acaba de instruir y salvar. Muere, resu
cita, sube al cielo, manda y predice la conversion del mundo : todo se cumplió : el cristianismo está es—
tablecido; subsiste hace mas de mil y ochocientos años, apesar de los esfuerzos renacientes de los incrédu
los de todos los siglos. Hé aqui el cuadro de la religión. Es imposible desconocer en él la mano de la
inteligencia todo—poderosa y eterna, que abraza con una ojeada todos los siglosº, vé todas las revoluciones
que deben sufrir todas sus criaturas, y traza desde el primer instante el plan que seguirá por toda la dura
cion de los tiempos. S. V

Para comprender el conjunto, tenemos tres signos que es necesario no separar. En la historia de la reli
gion que nos presentan los escritores sagrados, vemos:
Primero. Una cadena de hechos que se suceden, que no dejan ningun vacío, y en la que nada puede
separarse. El orden de las generaciones y de los acontecimientos nos conduce de Adan á Noé, de Noé á
Abraham, de éste áMoisés y de Moisés á Jesucristo. La creacion y la caida del hombre, el diluvio univer
sal y la dispersion de los pueblos, la vocacion de Abraham y las predicciones que atañen á su posteridad
son tres grandes épocas á que se refieren los hechos intermedios, y que preparan desde muy atrás la revela
cion dada por Moisés. Esta nos hace entreveer la venida del Mesias y la coversion de los pueblos, como el
término de todos estos preparativos. Hé aqui un plan general, un designio seguido, que demuestra que nada
es debido al acaso, y que nada ha sido escrito sin razon; no sucede asi con los l anales de los demas
pueblos, á los cuales los filósofos dan la preferencia.
Segundo. Una cadena de verdades probadas por estos mismos hechos, relativas siempre á las necesida
des actuales y á la situacion en que se encuentra el género humano. En la primera época, todo concurre
Eccles. c. 36, y. 16. Trad. de Amat.
2 Theod. de prov. orat. 1, p.321,
3 Tu es Deus conspector saeculorum. Eccles. c. 36, y 19. \
 XIV

para inculcar el dogma capital, que hay un solo Dios Criador, cuya providencia dirige todos los aconteci
mientos y gobierna, como Señor absoluto, el mundo que ha sacado de la nada. En la segunda, todo se re
fiere á demostrar que este mismo Dios es el fundador de la sociedad civil, el árbitro soberano del destino de
los pueblos, el que los hace visibles ó los destruye, los eleva ó humilla, los ilustra ó los deja en la ceguedad,
segun su voluntad. En la tercera, la revelacion, tiene por objeto el convencernos de que Dios es tambien el
autor de la santificacion del hombre, que su salvacion no es obra solo de la voluntad, sino de la gracia di
vina y de los méritos del Intercesor.
Asi es que desde la nocion del Criador y la primera promesa hecha al hombre pecador, la estension y
claridad de la revelacion va siempre aumentando, á medida que el hombre es capaz de comprender mejor
las lecciones mas amplias y perfetas, hasta la manifestacion entera y completa de la gracia y de la verdad
por Jesucristo. Por la revelacion primitiva, la ley natural no es conocida, sino en tanto que fue necesaria
para la prosperidad de las familias y obligar á los hombres á reunirse. Dios toleró en los patriarcas abusos
¿ debian cortarse en lo sucesivo; pero que hubiera sido muy difícil hacerlo entonces, al paso que no po—
ian producir tan malos efectos como en los pueblos mas civilizados. La ley de Moisés suprimia ó disminuia
una gran parte de estos abusos; pero el derecho de gentes, ó el derecho de una nacion, respecto de otra, era
muy poco conocido. Se hacia necesario que los hebreos permaneciesen aislados y en el , estado de separacion
en que vivian en aquella época todos los pueblos. El Evangelio solo ha desenvuelto los grandes principios
de moral social, de caridad universal y de humanidad; los antiguos filósofos no tenian mas conocimientos
que los demas hombres. En esto se reconoce el dedo de la sabia Providencia, que no da á sus hijos mas lec
ciones que las que son capaces de comprender, y no exige de ellos mas virtudes que las que están en relacion
con el grado de sus conocimientos.
Tercero. Una cadena de errores y estravios en los hombres indóciles; errores que provienen siempre del
mismo manantial, de su rebelion contra la autoridad divina. En la ley natural, los que se separaron de la
tradicion doméstica, cayeron en el politeismo y perseveran en él; adoraban las obras del Criador, sin , ado
rar al Señor en ellas; su culto no era mas que un caos de profanaciones. Tal es tambien el estado de los
pueblos en los que no ha alumbrado la antorcha de la revelacion; ningun progreso de la razon humana ha
sido capaz de sacarlos de su ceguedad. En la ley mosáica, cuande los judios se apartaron de su tradicion
nacional, cayeron en la idolatria: como todas las naciones circunvecinas, adoraban las obras de sus manos,
viviendo en una ceguedad, cual si Dios jamas se hubiera dignado ilustrarlos. En el seno del cristianismo.
el que abandona la tradicion universal o el catolicismo cae en la heregia, que no es mas que mna filosofia
errónea; y si continúa guiándose por su raciocinio, no permanece por mucho tiempo en ella, sino que pasa
rápidamente al deismo, al materialismo y al pirronismo absoluto: ó adora al Dios de Spinosa ó no adora á
ninguno. No tardaremos en verá qué abismo conducen estas consecuencias: es un encadenamiento en que
se encuentran envueltos sin advertirlo, los que asi raciocinan.
S. VI.
Entre los grandes genios que atacan en el dia á la religion ¿existe alguno que haya emprendido el echar
por tierra el plan general de la revelacion, ó que haya inventado argumentos fuertes para destruirla? Ni un
solo lo ha puesto en duda. Al oirlos, no parece sino que la religion es una cosa agena de la sociedad, que
no se sabe de dónde procede; que Jesucristo ha bajado á la tierra sin ser anunciado ni esperado; que el
cristianismo es el resultado de las ideas de un hombre singular, que soñó estar destinado para cambiar la
faz del universo.
No se presenta asi en nuestros libros santos.» Jesucristo, dicen sus apóstoles, es lo mismo hoy que ayer,
y lo será por todos los siglos 1. Existia en los decretos eternos antes del origen del mnndo º. Es el corde
ro inmolado desde la creacion 3. La obra que ha consumado desenvuelve, por fin, un misterio oculto en el
seno de Dios des le el principio de los siglos, y hace comprender la sabiduría de sus operaciones y desig
nios eternos 4.» Jesucristo ha formado del antiguo y nuevo Testamento una sola y única alianza º. S. Agus
tin prueba tambien que el cristianismo ha existido desde la creacionº. Bossuet dice que la religion es la
misma desde el origen del mundo 7.
Tratar de probar la verdad y divinidad del cristianismo, separando las dos épocas de la revelacion que
han precedido, seria ocultar la mas concluyente de sus pruebas, juzgar de una parte de un cuadro, hacien
do abstraccion de su conjunto, colocar á nuestra religion al nivel de la de los indios y de los chinos. No, su
origen es tan antiguo como el mundo, y tiene que ¿ tanto como él. Las demas no son sino escrescen
cias ó manchas que oscurecen ó desfiguran el plan general, ó á lo mas sombras que hacen resaltar mas los
rayos de luz. *

Del mismo modo que la religion doméstica de los patriarcas no debió perseverar sino hasta la época en
que los pueblos dispersados se reunieran para formar cuerpos de nacion; asi la religion, nacional de los
hebreos no debia subsistir sino hasta tanto que los pueblos mas civilizados fuesen capaces de componer una
sociedad religiosa universal. Si seguimos el hilo de la historia, vemos que la constitucion misma del cristia
nismo ha impedido que los pueblos de la Europa vuelvan á caer en la barbarie. Una cuarta revelacion ge
neral es por lo tanto imposible; no seria análoga á ningun esta lo de la naturaleza humana. Mientras que el
(1) Heb. c. 13, y, 8 —2) 1. Pet, c. 1, y., 20-3. Apóc. c. 13, y.8. — Enh. c. 3, y, 9 y 10 — 5. Fecit utraque unum, Ephcs., c. 2,
y 14.- (6) Retrac. l. 1, c. 13, n. 3. Epist. 102, q. 2 — 7 Discours sur l. Hist. univ. part. 2, art. 1.- -
 XV
universo esté civilizado, será cristiano; no existe civilizacion sin el Evangelio. Jesucristo ha abrazado en su
plan toda la duracion del mundo, cuando ha prometido á su Iglesia permanecer con ella hasta la consuma—
cion de los siglos, Largo tiempo antes de la mision de Moises, el Mesias habia sido anunciado como un
legislador que debia juntar á los pueblos: ninguna profecia nos habla de un nuevo enviado cuando Dios
mismo se ha dignado instruirnos en persona, ¿qué maestro será capaz de darnos mejores lecciones?
Jesucristo recibió de su Padre el soberano dominio sobre todas las cosas, todo ha sido criado para él y
por él, nada subsiste sino en él º; su reinado en el cielo es eterno 3, y no cesará sobre la tierra hasta que
todos sus enemigos estén á sus pies 4. S
. VII.

ORIGEN Y PROGRESOS DE LA INCREDULIDAD.

De dónde proviene la irreligion que se ha esparcido en nuestros dias por toda la Europa? La peste negra
que asoló en el siglo XIV una parte de nuestro hemisferio, no hizo progresos mas rápidos. Los autores sa
grados han atribuido constantemente al espíritu de las tinieblas los errores de los hereges, las supesticiones
de los idólatras, los artificios maliciosos de los incrédulosº, y nos enseñan á conocer los medios de que se
vale: Digámoslo de una vez, pues nos sobran razones para asegurarlo: la incredulidad es hija de la igno
rancia; en un siglo que se cree ilustrado no se conoce la religion. Esta ignorancia depende de varias causas:
unas son generales y otras particulares; la historia nos presenta las de los pueblos que nos han antecedido.
No es la primera vez que ha aparecido esta enfermedad epidémica en el mundo. Los griegos, cuando
llegaron al colmo de la prosperidad por sus victorias sobre los persas, se precipitaron en el epicureismo;
Roma, soberana del mundo, cargada con los desposojos del Asia, introdujo en sus muros con el lujo esa odio
sa filosofía; los judíos, libres de la persecucion de los reyes de la Siria y enriquecidos con el comercio de
Alejandria, vieron nacer el saduceismo, que no era mas que un epicureismo grosero. Segun las observa
ciones de muchos políticos modernos, los mismos navios que han aportado á nuestros puertos los tesoros
del nuevo mundo, debieron conducir á la par el gérmen de la irreligion y la enfermedad vergonzosa que
emponzoña los manantiales de la vida.
El lujo y la filosofía son inseparables; esta última no es mas que un lujo de conocimientos. Una nacion
que se congratula de haberse separado de las costumbres de sus abuelos, toma como punto de honor el re
nunciar á sus creencias. ¿No seria tan anómalo conservar la antigua religion de nuestros padres, como
llevar sus vestidos? El talento, transformado en calculador, computa las ventajas de un nuevo modo de
¿, como estima el producto de un nuevo comercio ó de un nuevo ramo de industria: nuestros filósofos
levan su rigorismo hasta evaluar el coste del pan bendito y de los ciriosº: se pone á precio la virtud y co
munmente les parece cara.
En un pueblo corrompido por el amor desenfrenado de los placeres, cuanto mas santa es la religion,
tanto mas odiosa se hace; se encuentra su moral tan distante del tono general de las costumbres, que es im
posible no aparezca como impracticable: el espíritu, enervado por las debilidades del corazon, no se fija
sobre esta moral sino con temor y espanto. Ha descendido desde su altura por una pendiente imperceptible,
y no se cree con fuerzas suficientes para volverá ganar la cumbre. Buscan argumentos especiosos para
probar que es inaccesible, que la cabeza se trastorna y ¿ no se puede respirar en ella: los filósofos que tra—
tan de demostrarlo están seguros de encontrar oyentes dóciles; Unos y otros se felicitan por su sagacidad, en
carecen los progresos de las luces del siglo, consideran la irreligion como el resultado de los conocimientos
ue han adquirido, no siendo mas que el efecto de los vicios que han contraido. Si pudiéramos lisonjearnos
¿ tener mas virtudes que nuestros padres, permílasenos pensar que en este caso seriamos mas ilustrados,
Los mismos panegiristas del siglo actual confiesan que «la edad de la filosofía anuncia la vejez de los
imperios que en vano se esfuerza en sostener: ella fue quien formó el último siglo de las bellas repúblicas de
la Grecia y de Roma. Atenas no conoció filósofos hasta la víspera de su ruina, que parecian predecir, Cice
ron y Lucrecio no escribieron sobre la naturaleza de los dioses y del mundo, sino en medio del estruendo
de las guerras civiles que escavaron la tumba de la libertad 7:» Triste reflexion! Si las antorchas de la
filosofía no eran mas que las teas funerarias del patriotismo y de la virtud, deberia prohibirse, sopena de
la vida, encenderlas jamas. - - - -

Otro especulador observa que el labrador necesariamente es supersticioso, el marinero impio, el guer
rero fatalista, el habitante de las ciudades indiferente 8. ¡Qué filosofía que depende de la profesion que se
ejerce ó de la mansion en que se habital
Pero ya es tiempo de que veamos por qué progresos insensibles, por qué encadenamiento de consecuen
cias ha llegado al colmo de la indiferencia que se nos quiere hacer mirar como el mas alto grado de sabiduria,
S VIII.
Un hecho constante, y en el que convienen muchos filósofos, es que las naciones bárbaras que asolaron la
Europa en el siglo quinto y en las edades sucesivas, hubieran destruido hasta el último gérmen de los cono
cimientos humanos, si la religion no hubiera puesto diques á su furor. Los eclesiásticos, obligados al estudio
1) Matth. c. 11, y 27.-2) Coloss, c. 1, y 16 y 17.-3) Il Pet.e., 1, y 11.—(4), I Cor. c. 15, y 25.-5) Ephes. c. 5, y 12
(6) Eneyelop. Pain veni.-7) Hist. des établ: des Europ. dans les Indes t. VII, c. 13.-8) Aur manes de Louis xy, t. 1, p. 297
 XVI
or su estado, conservaron una debil tintura de las ciencias que habian sido cultivadas bajo el dominio de los
¿ Siempre existieron escuelas establecidas en el recinto de los cabildos y de los monasterios, para
instruccion de la juventud: el nombre de clérigo era sinónimo al de letrado. La lengua latina consagrada á
los oficios de la Iglesia, aunque muy distante de su antigua pureza, fue despues un gran recurso para poder
leer los autores antiguos. En el silencio del claustro se ocuparon los monges en reunir y copiar los manus
critos que el génio destructor de los bárbaros habia respetado: en el renacimiento de las letras los archivos
de las iglesias y de los monasterios fueron los únicos depósitos en que se encontraron los monumentos de los
siglos anteriores.
La pompa esterior del culto divino contribuyó á conservar un resto del gusto á las artes; las indis -
pensables relaciones con la silla de Roma y las peregrinaciones por devocion fueron, por espacio de mucho
tiempo, el único medio de comunicacion entre las diferentes naciones de Europa; la tregua de Dios, estableci
da por un motivo de religion, suspendió por intérvalos los estragos de la guerra: uno de los principales obje
tos que se tuvieron presentes fue instituir muchas fiestas, á fin de interrumpir los trabajos de los siervos, opri
midos bajo la tiranía feudal. Antes del establecimiento de las ferias y de los mercados públicos; las romerias
ó el concurso de los pueblos á las fiestas y sepulcro de los santos, eran comunmente un punto de reunion pa
ra los comerciantes 1.
Luego si se encontraron algunos vestigios de humanidad, costumbres, educacion y luces entre los hombres
del siglo quince, indudablemente al cristianismo debe agradecérseleº. Sin la resistencia que el celo de la re
ligion opuso á las tentativas reiteradas de los mahometanos, hubieran invadido la Italia y las Galias: todo se
hubiera perdido.
Cuando los primeros literatos empezaron á volverá tomar el hilo de los conocimientos humanos, estarian
muy lejos de pensar que sus sucesores se sirvieran de allí á poco ¿
para atacará la religion, de los mis
mos medios que ella les habia conservado, y volvieran contra ella las mismas armas que recibieran de sus
manos: la revolucion fue tan ¿ como inesperada.
Era imposible que en medio de las tinieblas que habian cubierto la faz de la Europa por espacio de muchos
siglos no se deslizaran algunos abusos en la religion, d que las costumbres de los sacerdotes no se resintiesen
de la licencia que habia reinado en todos los estados; de aquí partieron para lanzar los primeros dardos con—
tra la constitucion del cristianismo. -

Los que se anunciaron en el siglo XVI, bajo el título de reformadores, conocian este abuso; creyeron re
mediarle destruyendo el principio á que le atribuian, á saber, la autoridad de la Iglesia. No vieron que
abrian una brecha, por la que iban á penetrar bien pronto todos los errores; que para echar por tierra su
cesivamente todos los dogmas y los cimientos mismos de la fé cristiana, no habia mas que seguir el camino
que trazaran. Con efecto, no tardaron en aparecer los socinianos, é imitando su proceder rechazaron todos
los dogmas que les parecian incomprensibles, y citaron al tribunal de la razon los oráculos de la palabra di
vina. Instruidos por este ejemplo los deistas no quisieron admitir ninguna revelacion, y pusieron en duda
muchas verdades de la religion natural. Por último, el materialismo, armado con sus argumentos, se atrevió
á levantar su cabeza altanera, y negar la existencia de Dios. Los escépticos, admirados de la lucha de estos
diversos sistemas, concluyeron por decir que nada habia de cierto; que en hechos de religion y de moral, un
filósofo debe atenerse á una duda absoluta. De aqui nació la indiferencia para con todas las opiniones, á la
que se ha dado el nombre de tolerancia. En el esceso del delirio, no puede ir mas allá el entendimiento hu
IIldIl 0.
S IX.
Esta progresion sorprendente está perfectamente marcada por las épocas de los corifieos que han estado
á la cabeza de estos diferentes partidos y por la fecha de sus obras. Lutero empezó á dogmatizar en 1517.
Calvino en 1532; Lelio, Socino y Gentiles hácia el 1550; Viret, uno de los reformadores, habló de los prime
ros deistas en su instruccion cristiana, en 1563. Vanini, ateo decidido, fué muerto en 1619. Spinosa se pre
sentó cuarenta años despues; La Motte-le-Vayer y Bayle, dos escépticos, escribieron á fines de este mismo
siglo; Montagne los precedió. -

En Inglaterra, los progresos de la incredulidad han sido los mismos. Despues de los combates de las dife
rentes sectas protestantes y socinianas, el deismo tuvo sus prosélitos. El lord Herbert de Cherbery, primer
autor ingles que lo redujo sistema, publicó su libro de Veritate, en 1624. Hobbes, Tolland, Blount, Shafts—
bury, Tindal, Morgan, Chubb, Collins, Woolston, Bolingbrocke, vinieron despues. Este último, lo mismo
que Hobbes y Tolland, sembraron los principios del ateismo en sus obras; David Hume, mas recientemente,
ha profesado el escepticismo en las suyas.
Nuestros incrédulos franceses, que hablan en el dia con tanto orgullo, no son mas que unos copistas de
los ingleses; es un hecho muy facil de probar. Han empezado por enseñar el deismo, é insensiblemente han
venido á parar al materialismo puro; y por último se han degradado hasta el punto de manifestar un pirro
nismo absoluto en sus libros. Citaremos mas adelante algunas de sus máximas 3.

(1) La primera feria franca en Francia empezó en Saint-Denis. Hist. des établiss, des Europ. dans les Indes, t. II. pág. 2.-(2) Vues
philos, de Prémontvanl, t. I. pág. 154. Hume. Historia de lu, maison de Tudor.t. II. pág. 9. -

(3. Los sectarios de los diversos sistemas de incredulidad no se apoyan sobre ninguna prueba positiva, sino en las dificultades que
ven en las opiniones de sus adversarios. Las dificultades y objeciones pueden inspirar dudas; pero no convencer. En general los in
crédulos son fluctuantes, inciertos, y nunca están persuadidos de lo que escriben.
 XVI
Este fenómeno, constantemente renovado, no puede ser efecto de la casualidad; esto se habia ya notado
en los antiguos filósofos. Trescientos años antes de nuestra era, los dogmas de la religion natural y de la
moral habian sido débilmente establecidos por Pitágoras, Sócrates, Platon y Aristóteles, que eran ante—
riores á esta época; mezclaron los errores con estas verdades esenciales. Los epicúreos y los cynicos que
se presentaron entonces atacaron unos la existencia de la divinidad, ó por lo menos su providencia, y
otros las leyes de la moral. Sus estravios fueron reemplazados por las hipótesis de Pirron y de sus descenl
dientes, que no querian admitir ninguna verdad.
No se necesita mas para convencerá un corazon recto, no solo de lo indispensable de la revelacion, si
no de la necesidad que tenemos de una autoridad visible para guiarnos en materia de religion; ambas
yerdades se deducen una de otra. El autor del artículo Unitarios, en la Enciclopedia, ha demostrado per
fectamente la progresion de las consecuencias que debe sacar cualquiera que piense, desde el momento que
haya franqueado las barreras de la autoridad . En este punto importante los principios están completamente
en armonia con los hechos, se apoyan unos en otros.
S.X.
Lo primero de que trataron los novadores fue de atacar la autoridad de la religion: no calcularon que al
echar abajo la tradicion de los dogmas, minaban por sus cimientos al mismo tiempo la de los hechos. No
se puede concebir por qué les es mas dificil á los hombres dar testimonio de lo que han oido, que el ates
tiguar lo que, vieron; si consideran como indigna la creencia respecto del primer punto, no vemos qué
confianza pueda dársele al segundo. Desde el momento que la tradicion de los hechos sea tan caduca y
tan incierta como la de los dogmas, el cristianismo no podrá sostenerse, porque está apoyado en los he
chos. Todos los argumentos que se han acumulado contra la infalibilidad de la tradición dogmática han
servido en general para estremecer por sus fundamentos toda certidumbre moral ó histórica . . . .
Estando esta íntimamente ligada á la certidumbre física, como lo probaremos, los golpes dirigidos á
una, no p0dian menos de recaer sobre la otra. Cuando se llega á dudar de las verdades físicas, no queda
mas que dar un paso para engolfarnos en los principios metafísicos, sobre los que basan nuestros razona
mientos. Propiamente hablando estas tres especies de certeza se apoyan sobre el mismo fundamento, el sen
tido comunº; no se puede atacar á la una sin disminuir la fuerza de las demas. -

Con el objeto de destruir la autoridad de la tradicion dogmática, los innovadores sostuvieron que los
pastores de la Iglesia habian cambiado la doctrina de los apóstoles; que la mayor parte de nuestros dog
mas son invenciones nuevas de la teologia. En el dia los incrédulos nos dicen que los mismos apóstoles
cambiaron la doctrina de Jesucristo; que el cristianismo, tal como le profesamos, fue inventado por
san Pablo y sus sectarios. Juliano autor de este particular pensamiento, le ha trasmitido á los doctores
modernos 4.
Para desacreditar los testimonios de la tradicion, los crílicos protestantes, se han desencadenado con
tra los PP. de la Iglesia; hacen sospechosa su doctrina, su moral, su capacidad, su conducta y su buena
féº. Desde los antiguos padres hasta los apóstoles, no es mucha la distancia, los deistas la franquearon:
han aplicado á los apóstoles los mismos reproches que habian hecho á sus sucesores º. No hay una
sola, objecion de las que inventaron contra los escritos de los PP., que no la hayan, renovado contra
los de los apóstoles. De los mismos argumentos que los críticos lanzaron contra la autenticidad de ciertos li
bros de la Escritura, se han valido los incrédulos para atacar todos los demas; las dificultades
que se oponen actualmente à los milagros del cristianismo fueron forjadas por los protestantes contra los
de la Iglesia romana. - -

Cuado se trató de examinar los poderes de la mision de los pretendidos reformadores, los católicos
objetaron que hombres, sujetos á todas las pasiones humanas y á errores de que sus discípulos debieran
avergonzarse, no podian ser delegados por Dios para reformar la Iglesia. Para salir de este atolladero, los
novadores respondieron que los apóstoles mismos estuvieron sujetos á errores y pasiones humanas,
y se esfuerzan en probarlo. De estas acusaciones, aunque falsas, los deistas concluyen que los apóstoles no
fueron enviados por Dios para ilustrar y corregir á los hombres: esta crítica impía no tardó en dirigirse
contra el mismo Jesucristo, vituperando su doctrina, costumbres, intenciones y virtudes, y deduciendo contra
él la misma consecuencia. Los socinianos, convertidos en deistas, trataban de disimular, haciendo pomposos
elogios de Jesucristo; pero se desataban en injurias contra Moises º; sus sucesores, menos hipócritas, han
blasfemado tambien contra uno y otro. Los maniqueos y los marcionitas, que sostenian que la religion ju
dáica era demasiado grosera para haber sido revelada por un Dios infinitamente sábio, pretendian al mis
mo tiempo probar que este mundo era muy imperfecto para ser la obra de un Dios infinitamente bueno; su
cediéndose asi unos errores á otros.
Si digéramos á los protestantes que un fiel debe usar de su razon para conocer cuál es la verdadera
Iglesia, y pesar las pruebas de su infalibilidad, y despues de conocida, dejarse guiar por esta autoridad,
absurdo...! exclamarian: de aquise seguiria que la Iglesia padria enseñar toda clase de errores, sin que sus
1 véase pues Bayle, Diet, erit. art. Acosta. Apol pour les catholof, t.
3 Véase ¿? an essai on the nature ¿
2, c. —4. —2
truth. Véase
Hist. crit.Dallé de usº Patrum.
de Jesus-Crist. -

Table dès saints. Examen

erit. de Saint. Paul, etc.— 5 Daillé, de usu Patrum. Si los º póstoles mismos no estuvieron exentos de errores y debidº esºs le
admirar que sus mas celosos discipulos fuesen susceptibles de ellos? Barbeyrae: Trail, de moral des Peres, c. S.S. 3º, etc.
6 Premiere litre scrite de la Montagne pag. 23 y 2) trosieme lettre pag. 97 , 98 y 18 - 7 Vease Morgan, Moral phi
losopher, etc.
TOMO l. 3
 XVIII
miembros tuviesen derecho á consultar su razon, para saber si los han de admitir ó rechazar. ¿Es mas
dificil á la razon el juzgar cuál es la verdadera doctrina, que el saber cuál es la verdadera Iglesia?
Bien, replican los deistas; segun vosotros, no se puede juzgar de la mision de Jesucristo y de los apósto
les, ni de la inspiracion de los libros santos, sino por medio de la razon; luego tambien á ella toca el ver
si su doctrina es verdedera ó falsa; de otro modo Jesucristo, los apóstoles y la Escritura podrian enseñar
toda clase de errores, sin que tuvieramos el derecho de consultar á la razon, para saber si ¿. admi
tirlos ó rechazarlos.
En virtud de esta retorsion, ha sido preciso convenir en que á la razon atañe en último resultado juz
gar cuál es, aun en la Escritura misma, la doctrina digna ó indigna de Dios, y por consiguiente la revelada
ó no revelada. En este caso no tenemos mas obligacion de creer en la Escritura que en cualquier otro libro.
Este es el deismo puro. En las obras de los protestantes contra los deistas, no hemos encontrado ninguna res
puesta á este argumento.
Todas las sectas, al establecerse, exigieron la tolerancia, bien resueltas á no observarla en el momento
que adquirieran fuerzas. Segun los principios que sentaron, la tolerancia debeser ilimitada; los judios, maho
metanos, paganos, deistas y los ateos, tienen tánto derecho á ella como otro hereje cualquiera. Esto lo han
demostrado á la vez los católicos, los protestantes y los incrédulos 1. En efecto, todas las razones en que se
apoyaban los calvinistas para exigir la tolerancia han sido vueltas contra ellos por los socinianos º. Los deis
tas á su vez se han servido de ellas para probar que les era permitido dogmatizar 3. Por último los ateos las
hacen valer en el dia á su favor, y se escudan con ellas para enseñar impunemente el materialismo 4: Tam
hien está demostrado de hecho y por el raciocinio, que la tolerancia universalmente reclamada es el alimento
de todos los errores y la destruccion de toda religion.
S. XI.
Si continuamos la progresion de las controversias que se han suscitado, no dejaremos de ver el efecto
que tenia que producir el principio de donde han partidó, y la cadena de consecuencias que era preciso re
correr. Desde ¿ los reformadores se levantaron contra la autoridad de la Iglesia, y se abrogaron el dere—
cho de juzgar del sentido de la Escritura, este libro divino, lejos de conciliar las opiniones y reunir los co—
razones, no sirvió mas que para dividirlos. Los mismos argumentos, con que los calvinistas atacaron el mis
terio de la Eucaristia, sirvieron á los socinianos para combatir todos los demas misterios. La mayor objecion
que los primeros han creido hacer contra la transubstanciacion ha sido puesta en práctica por David ilume
contra todos los milagrosº. Otros han ido mas allá. Si Dios, dicen, no nos ha enseñado otras verdades que las
que estan en armonia con la luz natural, no vemos por qué es necesaria la revelacion. Desde que el cristia
nismo, continuan, nos ha enseñado misterios, hay lugar para pensar que no existe una religion revelada, y
que no está apoyada sobre pruebas seguras. Los enemigos de la revelacion empiezan por considerarlas como
falsas; no hay necesidad, segun ellos, de pruebas sobrenaturales para establecer verdades conformes á las
luces de la naturaleza; y por, consiguiente, no puede obligársenos á creer dogmas contrarios á nuestras
ideas naturales. Han disputado las profecias y los milagros; han sostenido, que no solo son falsos, sino
imposibles: para probar esto, se ha recurrido al sistema de la necesidadó de la fatalidad, que conduce al ma
terialismo. Pero si las pruebas del cristianismo son otras tantas fábulas, si esta religion que parece tan
santa no es mas que una impostura, ¿existe una providencia que vela sobre la religion, un Óios que exi
un culto del hombre y le impone leyes? Cuando se origina tal duda, no se está muy lejos del
dleISI)0.
Los deistas tambien han atacado á la revelacion, orque no ha sido dada á todos los hombres; pero se les
ha demostrado que su pretendida religion natural ¿en el mismo caso, que no la han conocido los paganos,
fue ignorada por los pueblos bárbaros; esta es una nueva objecion contra la providencia, que los aleos han
echo valer. A los deistasse les ha contestado que el que admita un Dios tiene que admitir misterios; que mu
chos atributos de Dios son incomprensibles y parecen inconciliables. Por no retroceder nuestros deistas ponen
en duda todos los atributos de la Divinidad, que no se conciben. No les es dificil á los ateos poner en ridículo á
un Dios que los deistas no se atreven á confirmar.
Estos últimos fundan su incredulidad sobre la insuficiencia de los testimonios de la revelacion; los pri
meros la establecen sobre las pruebas que suministra la razon. Segun los deistas la providencia no ha hecho
el bien suficiente á los hombres en órden de la gracia; segun los ateos, no se le ha hecho en el de la naturale—
za, pues que existe el mal en el mundo. ¿Pero tomaremos por punto de comparacion de la bondad divina la
cegüedad de los espíritus pertinaces y la ingratitud de los malos corazones? Comparando la justicia divina
con la humana, los deislas y socinianos han sostenido que Jesucristo no ha podido satisfacer por nosotros; ha
ciendo lo mismo con la bondad divina y humana, los ateos concluyen que la existencia del mal destruye el
dogma de la providencia. -

. Papin sur la tolerance des Protestans; Bayle, Com.phil. II Part., c. 7. straité sur la tolerance, c. 22. Hume, Hist. nah de la
pág. º
rs,ºssuel Arert
0.,,á ºrº, ºur proestants., III, part., 3 Emile, t. 3. p. 172. Lettre á M de Beaumont, pág, 74, --4. Syst. de
la nat , t. 2, c. 1, 12, 13. º autor de Emilio ha probado muy ien á los protestantes, que al este que el ¿
no habia hecho mas que seguir los principios fundamentes de la reforma, Deuriene lettre de la Montagne, p. 47 y 69.
 XX.

S. XII.
El axioma sagrado de unos y otros es que el hombre no debe escuchar mas que su razon, y no ren
dirse sino á la evidencia, rechazando todo lo que le parezca falso y absurdo. Veamos los diversos usos
á que han aplicado esta máxima seductora.
Conozco claramente que tal ley, disciplina, ó tal uso religioso es un abuso; que la razon, el buen or
den y el bien público exigen su reforma; luego debo trabajar para introducir una disciplina contraria, á
r de todos los obstáculos; romper, si es preciso, toda sociedad con los que se obstinen en sostener el
uso actual. Hé aqui el fundamento de la conducta de todos los cismáticos.
Tengo una evidencia inalterable de que no hay mas que un solo Dios: la divinidad de Jesucristo es,
pues, un error: que un cuerpo no puede estar en muchos lugares diferentes á la vez; la presencia real de
Jesucristo en todas las hostias consagradas es un dogma absurdo: que Dios no puede ser uno y trino,
y por consiguiente, el misterio de la Trinidad es una contradiccion. Los pasages de la Escritura con que
quiere probar, la divinidad el Verbo, la presencia real y la Trinidad, tienen que esplicarse por otros que
¿ dicen lo contrario. De este modo raciocinan los arrianos, los socinianos, los protestantes y todos
os seclarios que han aparecido desde el nacimiento de la Iglesia.
Estoy íntimamente convencido de que Dios no puede revelar dogmas absurdos, ininteligibles, contra
dictorios, indignos de su sabiduria y de su veracidad suprema; veo iguales dogmas en todas las religiones
que se dicen reveladas; luego todas estas pretendidas revelaciones son quimeras; luego todas, las pruebas
sobre que pueden apoyarse son falsas; luego es preciso atenerse á la religion natural. Tal es el sistema de
los deistas.
No es posible dudar por un momento que un Dios, que tomase interés en que los hombres le rindiesen
homenage, no les revelará directamente y sin interrupcion su forma; no permitiria que dejasen de hacerlo
por una ignorancia invencible.
Si ¿ un Dios, esclama Tolland, y un Dios que se interesara en la felicidad de los hombres, se
compadeceria al ver el estado de incertidumbre y de ignorancia en que estoy 1. Este es el lenguaje de los
que sostienen la indiferencia de las religiones, y de los que ninguua quieren. - -

Es evidente, que no existe un ser dotado de cualidades incompatibles, cuyos atributos sean inconciliables
y contradictorios; luego cualquiera que sea la idea que se me quiera dar de Dios, no solo no le concibo sino
que veo en él ¿ luego Dios no existe ni puede existir. Los ateos no cesan de repetir esta
pretendida demostracion 2.
Un filósofo no debe admitir mas que lo que concibe, y todo aquello cuya existencia esté demostrada.
Ahora bien, lo que dicen de los espíritus y de las sustancias distintas de la materia es inconcebible: sus cua
lidades, sus operaciones y su modo de ser son otros tantos misteriosininteligibles, de los cuales no se puede
tener una idea clara. No concibo mas que cuerpos; mis sentidos no pueden atestiguarme la existencia de
un ser distinto de la materia: luego ¿ es materia, los espíritus son quimeras. He aqui el grande argumen
to de los materialistas. - a

Pues que un filósofo no debe admitir sino lo que concibe, yo no puedo , afirmar la existencia, de un
ser cualquiera. La ciencia de la materia y la mayor parte de sus propiedades son inconcebibles. Lo que
se dice del tiempo ó de la duracion, sea finito ó infinito, del espacio creado ó increado, del movimiento,
de la divisibilidad de la materia, del principio interior de las operaciones del hombre, de las causas fisi
cas, etc. es ininteligible, no hay uno sólo de estos objetos sobre los que no se puedan originar cuestiones
irresolubles; por otra parte, los sentidos nos engañan, no nos manifiestan mas que apariencias, su testimo
nio no debe prevalecer sobre el de la razon; luego nada hay cierto; á lo mas se pueden admitir probabilidades
y semejanzas. Asi han hablado los acatalépticos, los académicos, los escépticos y los pirrónicos, lantas veces
copiados por los filósofos modernos 3.
S. XIII.
Si la máxima sobre que se fundan lo incrédulos es cierta, el pirronismo es pues el único sistema raz0
nable. Despues de haber supuesto que la evidencia de nuestras ideas debe ser la sola regla de nuestros juicios,
fácilmente se prueba que esta evidencia se reduce á la nada; un filósofo no la ve mas que en sus propias opi
niones, por absurdas que por otra parte sean 4. -

Reasumiendo en dos palabras, los protestantes han dicho: , no debemos creer sino lo que está exoresa
mente revelado en la Éscritura, y la razon es la que determina el verdadero sentido. Los socinianos han
replicado: luego, nosotros no debemos creer revelado sino lo que está conforme con la razon. Los deistas
han concluido luego la razon basta para conocer la verdad sin revelacion: toda revelaciones inutil, y por
consiguiente
zon; luego nofalsa.
debe Los ateos han
admitirse masdicho:
que laahora bienLos
materia. lo que se dice de
pirrónicos Dios ylademarcha,
cierran los espíritus es contrario
diciendo: á la ra
el materialis

1 Dialog. sur lº ame, p. 64 - • -

3 sust. de la nat. t. II, c. 2 Traité des erreurs populaires, p. 114. - -

3 El que no se rinda verdaderamente sino á la evidencia, no estará seguro mas que de su propia existencia. De lº Esprit.
t. I, note, p. 22.
4. No ha vo á profesar ninguna opinion , no veo mas que incomprensibilidad en uno y otro sistema. Cuest sur lº encyclop,
- -

1 dée, 1. sect. Adorad un Dios, sed hombre de bien, y creed que dos y dos son cuatro. Dict.philos. Necessaire.
 XX.

mo contiene mas absurdos y contradicciones que todos los demas sistemas; luego no se puede admitir
ninguno 1.
¿n un deista inglés: del mismo modo que el calvinismo ha producido entusiastas en su origen, hizo
tambien nacer los ateos. Un ateo no es mas que una especie de entusiasta, idólatra de su razon, que declama
contra Dios y su providencia º.
De esta suerte el primer paso en la carrera del error ha conducido á nuestros razonadores temerarios al
último exceso de ceguedad; asi la razon entregada á sí misma no encuentra límites en donde pueda conte
merse; es arrastrada por el hilo de las consecuencias mucho mas allá de lo que habia previsto. Todo
hombre que ha seguido el nacimiento y progresos de las diferentes opiniones se convence de que entre
la verdad establecida por la mano de Dios y el pirronismo absoluto, no hay un medio en el que pueda
permanecer firme el entendimiento humano.
El que blasone de raciocinar, tiene que ser cristiano católico, ó enteramente incrédulo y pirrónico en
toda la extension de la palabra.
Nuestros adversarios mismos han confesado la verdad de esta teoria; dicen que destruido una vez el
cristianismo, la existencia de Dios y la inmortalidad del alma caen por sí mismas: pero que admitido un
Dios, hay necesidad de admitir todas las consecuencias que deducen de él los supersticiosos; es decir, los
cristianos; que estos raciocinan mas consecuentemente y estan mas en armonia consigo mismo que los
deistas: que el deismo es un sistema en el que el entendimiento humano no puede permanecer por mucho tiem
po 3. Solo el temor á las consecuencias es lo que conduce á los incrédulos al ateismo; por el miedo de verse
obligados á creer demasiado, toman el partido de no creer nada. Su manera de filosofar, dice un enciclope
dista no es en el fondo mas que el arte de dejar de creer 4. Del mismo modo que los socinianos han demostra
do á los protestantes que no habian seguido sus principios hasta donde ¿
llegar, y que se detnvieron
sin saber por qué un deista prueba á los socinianos que son culpables de la misma inconsecuencia. Despues
un ateo ataca á los deistas, y les hace ver que ellos mismos son unos razonadores pusilánimes, y que se
contradicen: y por último, un pirrónico á su vez prueba á los ateos que no raciocinan, que un dogmático
cualquiera presenta el lanco á sus adversarios y se encuentra atravesado con sus propios dardos. Aho
ra preguntamos nosotros, si llevada hasta este punto la cuestion, puede ser dudoso el triunfo de la religion;
cuando para desembarazarse de sus enemigos, no tiene que hacer mas que dejarlos á ellos mismos el cuida
dado de destruirse,
S. XIV.
Cuando se comprenden los verdaderos motivos que mueven á la mayor parte de los apóstatas de la reli
gion, casi se encuentra uno determinado á no darles oido; ellos mismos han tenido la complacencia de des
lruirse unos á otros.
«Si nos remontamos, dice uno de ellos, al origen de la pretendida filosofia de estos malos razonadores,
encontraremos que no estan animados de un amor sincero para con la verdad; no tratan de los males sin
número que la supersticion ha ocasionado en la especie humana, de la que los veremos afectados, sino de
esas trabas importunas con que se encuentran atados por la religion, que estando en algunas ocasiones en
armonia con , la razon se opone á sus estravíos. De suerte que su perversidad natural es la que les hace
enemigos de la religion; solo renuncian en ella cuando es razonable: á la virtud , es á la que aborrecen mas
que al error y á los absurdos. La supersticion les desagrada, no por su falsedad ni por sus malas cousecuen
cias, sino por los obstáculos que opone á sus pasiones, por las amenazas de que echa mano para atemorizar
los, y por los fantasmas que presenta para obligarlos á ser virtuosos....»
Los mortales arrastrados por el torrente de sus pasiones, de sus hábitos criminales, por la disipacion y
los placeres, ¿estan en estado de buscar la verdad, meditar sobre la naturaleza humana, descubrir el siste—
ma de las costumbres y colocar los cimientos de la vida social? Podrá gloriarse la filosofia de tener por
adictos, en una nacion disoluta, una masa de libertinos disipados y sin costumbres, que desprecian sobre
su palabra una religion como lúgubre y falsa, sin conocer los deberes con que tienen que sustituirla? Se
lisongeará con los homenages interesados ó con los aplausos estúpidos de un tropel de borrachos, de ladro
nes públicos, de intemperantes y voluptuosos, que, desde el olvido de su Dios y del desprecio que hacen de su
culto, concluyen que no se deben nada á sí mismos ni á la sociedad, y se creen sabios porque muchas
veces, temblando y con remordimientos, arrojan á sus pies quimeras que les obligan á respetar la decencia y
las costumbres?5
No hubiéramos osado decir tan terribles verdades, pero nos es permitido copiarlas; los incrédulos no pue
den definirse mejor que por los maestros que los han formado.
El autor del Sistema de la naturaleza no se expresa con menos energia al investigar las causas que
ueden conducir al ateismo y á la irreligion. La primera, segun él, es la indignacion que inspira á todo
¿ que piensa, la vista de los males que han producido en el mundo la idea de Dios y de la religion.
La segunda es el temor importuno que debe originarse en el entendimiento de todo razonador, al concebir
la idea de un Dios, tal como le pintan sus implacables ministros: es decir, de un Dios vengador del crimen
1 Al trazar esta genealogia impura, , no tenemos la menor intencion de ofender á los protestantes, si ellos desconocen á
sus descendientes , , estos, mas hombres de de bien, no niegan á sus antepasados; los protestantes, dicen, han empezado la re
volucion , pero no la han llevado a acabo... Por último, se ha , adelantado tanto, que será preciso retroceder.
2 Morgan. Morat philosopher, t. I. p. 219. — 3 Syst. de la nat.t., II, c. 7. pág. 221 e suiv. C. 12, ¿ 357. Premiere lettre,
a Sophie, p. 5: Deuxier e lettre, p. 1 Dialog. sur. áme, p. 145, 16; le bon Sens, par. 17, y 18— Encyclop, Unitaires, p. 399.
5 Essai sur les prejugés. c. 8, p., 18 et suiv,
 XXI

y remunerador de la virtud. La tercera son las pasiones é intereses de los hombres que los impelen á ha
cer investigaciones.
Se trata de saber en este momento si un entendimiento preocupado por el temor y las pasiones está
en estado de hacer investigaciones con fruto y descubrir la verdad.
«Convendremos, dice, en que muchas veces la corrupcion de costumbres, el libertinaje, la licencia y
aun la ligereza de espíritu, ¿ conducir á la irrelijion ó á la incredulidad; pero puede uno ser liber
tino irreligioso, y preciarse de incrédulo, sin ser ateo...... Muchas personas renuncian á las preocupa
ciones recibidas, por vanidad y sobre su palabra; estos pretendidos espíritus fuertes nada han exami
nado por sí mismos, se refieren á otros que suponen haber pesado las cosas coi, toda detencion... Un
voluptuoso, un relajado sumido en la embríaguez, un ambicioso, un intrigante, un hombre frívolo y disipa
do, una mujer desarreglada, un erudito á la moda, ¿son personas capaces de juzgar de una religion que
no han profundizado, sentir la fuerza de un argumento y abrazar el conjunto de un sistema?... Los hombres
corrompidos no atacan á los dioses sino cuando los creen enemigos de sus pasiones.»
Sin embargo, segun el mismo autor, «es necesario ser desinteresado para juzgar bien de las cosas; es
preciso estar dotado de luces y un buen juicio para comprender un gran sistema. Al hombre solo perte—
nece el examinar las pruebas de la existencia de Dios y los principios de toda religion... El hombre honrado
y virtuoso es el único juez competente en una cuestion tan grave 1.» -

Si antes de leer un libro escrito en contra de la religion, se empezara por preguntar si es el autor
hombre de bien, virtuoso, honrado, sabio y desinteresado, dificil seria entonces que hiciera prosélitos
ninguna de esas obras.
Otro tercero dice con franqueza: «Quisiera mejor ser reducido á la nada de una vez, que no el abra
sarme por toda una eternidad; me parece mejor la suerte de las bestias que no la de los condenados. La
opinion que me desembaraza de los temores que nos abruman en este mundo, me parece mas risueña que
la incertidumbre en que me deja la opinion de un Dios acerca de mi suerte eterna...; No se vive feliz
temblando siempre. Un Dios, que condena por toda una eternidad , es evidentemente el mas odioso de los
seres que el entendimiento humano pueda inventarº.» -

He aquí el manantial de donde han sacado sus razones nuestros filósofos; el temor de arder eternamen
te; este temor no le abriga un alma pura, honesta y virtuosa; el infierno está solo destinado para los ma
los. El confesar que atormenta esta idea, es decir que no se tiene la conciencia limpia. Nuestros adversa
rios prefieren, nó la opinion mas verdadera y mejor probada, sino la mas risueña y mas acomodada al pla
cer, y no es el raciocinio el que los anima.
Uno que hace poco escribió, conviene tambien en que entre la religion y el ateismo, está el corazon y
el temperamento, no siendo la razon la que decideº.
El autor del libro del Espíritu no habia formado la mejor opinion de sus compañeros. «Tal vez, dice,
hay ocasiones en que nuestros autores cuidan mas de la correcion de sus obras, que de la de sus costumbres,
y toman el ejemplo de Averroes, que segun dicen, se permitia ciertas pilladas, que consideraba, no solo
como perjudiciales, sino como útiles para su reputacion 4.
Otro confiesa que en el último grado de las fragilidades, los principios de la religion vuelven átomar
su ascendiente, porque entonces necesitamos razones que nos tranquilicen en el senó de los place
res 5. Luego queda demostrado que no puede existir la incredulidad, ínterin tengamos necesidad de razones
para tranquilizarnos en el seno de los placeres. S
. XV.

Acaso habrá muchos que no merezcan este reproche, y que al menos tengan costumbres honestas;
pero á nosotros no nos toca hacer investigaciones acerca de su conducta ; podemos juzgarlos todavia me
jor valiéndonos de sus propios testimonios. Por otra parte es muy dificil formar buena opinion de maestros
que por sí mismos confiesan que han sacado discípulos corrompidos, y fiarnos en principios que siempre
son adoptados por los corazones viciosos y espíritus perversos.
Según ellos, nosotros atribuimos malamente á la incredulidad los vicios que provienen mas bien del lujo
y de las pasiones º: sea asi, pero entonces con menos razon pueden atribuirlos á la religion. ¿En qué caso cau
sarán las pasiones mas daño: bajo el yugo de la religion que las condena, ó bajo el reinado de la increduli
dad que les da rienda suelta? Jamas fue llevado el lujo á un esceso en cualquier nacion sin arrastrar tras, sí
el libertinage del entendimiento y del corazon. Que la filosofía incrédula sea hija del lujo, como todos los de
mas vicios, nadie lo ignora: un padre tal, jamas dará honor á sus hijos.
«El ateismo, dicen, no se ha hecho para el vulgo, ni aun para el mayor número de hombres... Los seres
ignorantes, desgraciados y timidos, siempre se forjarán dioses... Los principios del ateísmo no son para el
pueblo, ni para talentos frívolos, ni para los hombres ambiciosos é inconstantes, ni para un gran número de
personas, que aunque instruidas, por otra parte no tienen suficiente valor» 7. No obstante repiten sin cesar la
máxima de que la verdad es hecha para todo el mundo; de lo que se deduce que el ateismo no es la verdad.
«Leucippo, Demócrito, Epicuro, Straton y algunos otros griegos se atrevieron á rasgar el velo espeso
de la preocupacion, y predicar el ateismo: no fueron escuchados. Entre los modernos, Hobbes, Bayle, etc.,
1 Syst de la nat.t. 11. c. 10. p. 360 et suiv. 2 Le bons Sens , pár. 108, 82, S8. 3 Aur, manes de Louis XV, p. 291.
4 De lº Esprit 2. Dis., c. 6. p. 142. 5 Dialog. sur. 1' áme p., 133 et suiv. Conservad vuestra alma, en estado de ,desear siem
pre que haya un Dios, y º duda reis de él. J. J. Rousseau, Esprit et Maximes, etc., p. 4. 6 Histoire, des établiss. des Eu
rop. lans los Indes, t. 5. l. 13. p. 176. 7 Syst. de la nat., t. 11, c. 10, 12, 13, p. 217,332, 381. Lo bon Sens, pár. 195.
 XXII -

han seguido las huellas de Epicuro; pero su doctrina encontró muy pocos sectarios demasiado acostumbrados
á las fábulas, para escuchará la razon... Los que han tenido valor para anunciar la verdad, generalmente
han recibido el castigo de su temeridad 1. «Es muy peligroso que nuestros doctores de la verdad no tengan
en el dia la misma suerte».... -

Preguntan qué mal puede hacerse á los hombres al proponerles cualquiera sus ideas? Algo peor es de
jarlos en la duda y en la incertidumbre, si ya no lo estuvierenº. Al mismo tiempo observan que para mu
chas personas el quitarles la idea de Dios, seria arrancarles una porcion de sí mismos 3; que la duda sobre
este objeto no es nada menos que una cómoda almohada 4; que la duda en hecho de religion es un estado
mas cruel que el espirar en el tormento º; podemos dar gracias á estos maestros caritativos que quieren ar—
rancarnos una porcion de nosotros mismos y colocarnos en una situacion peor que el morir en el tormento.
Si, despues de éstas declaraciones tan precisas, llegan á seducir á cualquiera, será porque este consienta en
ello. Montaigne, hablando de los tales, los llama hombres miserables y de cabeza ligera, que tratan de ser mas
malos que lo que pueden º.
S. XVI.
Acaso se creerá que los incrédulos modernos han hecho descubrimientos de que los antiguos no tenían
ningun conocimiento, que han creado nuevos sistemas; error. Ellos tomaron sus materiales en manantiales
abundantes, que son bien conocidos. Para atacar las verdades de la religion natural, han presentado en la
escena las objeciones de los epicúreos, de los pirrónicos, de los cynicos, de los académicos ríjidos y de los
cirenáicos; es la doctrina de los griegos renovada. Pero callaron las razones con las cuales Platon, Sócrates,
Ciceron, Plutarco y otros refutaron sus visiones. Contra el antiguo Teslamento y la religion judáica, rejuve
necieron las dificultades y calumnias de los maniqueos, de los marciovitas, de Ceso, Juliano, Porfirio y otros
filósofos; el mas célebre de nuestros adversarios ha convenido en esto mismo.7. La mayor parte se encuentran
en Oríjenes, Tertuliano, san Cirilo, san Agustin y otros Padres de aquel tiempo; pero los incrédulos supri
mieron las respuestas de estos autores.
Cuando han querido combatir al cristianismo, nuestros adversarios todavia se han portado mejor: copia
ron los libros de los judios y de los mahometanos 8. Los escritos de Isaac Orobio, el Minimem fidei, todas las
demas obras compiladas por Wagenseil ºestán cortadas y cosidas áretazos en los libros de los deistas; su glo
ria es debida á los rabinos. Contra el catolicismo han formado un estracto de los reproches de todos los he
rejes y principalmente de los controversistas protestantes y socinianos. Por último, para hacer sospechosos
los títulos de nuestra creencia, han echado mano con mucha formalidad de un método que el Padre Hardouin
no habia aventurado sino como un juego ingenioso sobre una cuestion muy indiferente. Ya veremos en esta
obra la cadena de tradiciones por medio de la cual han llegado hasta nosotros esos sublimes descubrimientos,
y tendremos cuidado de restituir á cada uno lo que le pertenezca.
Los primeros incrédules franceses debieran avergonzase de haber sacado sus reflexiones de manantiales
tan impuros; copiaban á los ingleses, sin saber de donde tomaban estos tantas riquezas literarias. El veneno
se presentaba entonces por lo menos enmascarado bajo la apariencia de la decencia. En el dia no han teni
do tanta delicadeza; con su pluma han dejado correr toda la hiel que los rabinos vomitaron conta Jesucristo
contra el Evangelio sin dulcificar su amargura y toda la bilis de los controversistas protestantes contra la
Iglesia romana; por el contrario parece que tratan de sobrepujarse los unos á los otros. Gracias á su intrepidez
no hay blasfemias, sarcasmos, invectivas y groserías, á las que no hayamos tenido que acostumbrarnos.
S. XVII.
Sin embargo, nos acusan de ignorancia, credulidad, ceguedad y prevencion. Segun ellos, no tenemos á la re
ligion sino como una preocupacion de nacimiento, por respeto á la autoridad de nuestrosmaestros y antepasa
dos, por no reflexionar y consultar á la razon; que empezamos á creer antes de examinar. Concedámoselo por
un momento: nosotros sostenemos que no hay escritores mas crédulos ni mas imiladores que los pretendidos
filósofos. Ya convienen en que la mayor parte renuncian á la religion por panidad, y sobre su palabra se refie
ren á otros, no hallándose en estado de profundizar una cuestion, y sentir la fuerza ó la debilidad de un argu
mento. No es la razon sino la ¿ que los determina. Si un incrédulo cualquiera ha adelantado un
hecho falso, absurdo, cien veces refutado, no por eso es menos repelido por veinte autores que vinieron des
pues, sin que uno solo se haya dignado comprobarle. Copiarciegamente á Celso, J uliano, los judios socinianos,
los deistas ingleses, los controversistas de todas las sectas, sin eleccion, sin crítica, sin precaucion; compilar,
repetir, estractar, afirmar ó negar al acaso, porque otros hicieron lo mismo, ¿no es ser crédulo? Cuando el
deismo era moda, todo filósofo era deista; el mas atrevido osó decir: Todo es materia, é hizo como que lo pro
baba; al momento el rebaño docil repitió con toda su alma; todo es materia; é hicieron un acto de fé de la pa
labra de su oráculo. Esto es iodo lo que son. Los mas incrédulos, en hechos de pruebas, son siempre los mas
crédulos en hechos de objeciones,
Antes de leer lo que se objeta contra la religion, ¿qué estudio han hecho de sus pruebas la mayor
arte de los lectores? Ñinguno ¿Es de admirar que en la fuerza de las pasiones, sin ningun preserva
ivo contra el error, un jóven sea seducido con facilidad por los falsos resplandores de los racioci
1 Le bon Sens, pár. 204. 2 Syst. de la nat.t. I, c. 2 et 13, p. 331, 383. L 3, Ib. c. 13, p. 388., 4 Le bon Sºs, pár. 123
5 Dial. sur l' áme p. 139. 6 Essai sur, le mérite el la , vertul. 1, p. 6, 7 Cuestions sur l' Encyclopedie, Contradiction
p. 12. 8 V. Maracéi, Prodom. ad refut. Alcorani. - 9 Tela ignea Satanae. *
 XXIII

nios filosóficos, por los hechos desfigurados y por el ridículo en que se pone á la religion? Todo le
parece claro, evidente y demostrado en los escritos de los incrédulos; no sospechan siquiera que ec
sista respuesta para ellos. Las impresiones recibidas se graban profundamente; alhagan á la vez al es -
pírilu y al corazon; y á menos que no sea por un milagro, las conservan para el resto de su vida.
Desde que recorre algunas páginas, se cree un doctor, cuando no es mas que un ignorante.
Despues de haber leido por espacio de veinte años todas las obras escritas contra la religion , des
de haberse llenado la cabeza de objeciones, sofismas, prevenciones y anecdotas falsas, un hom
re, que se tiene por imparcial, se resuelve por último á leer uno ó dos de nuestros apologistas. Si
no encuentra desde luego con qué satisfacer todas sus dificultades y calmar sus dudas, concluye de
esto que la religion no está probada, que los argumentos de sus enemigos son irresolubles. Me pare
ce ver un enfermo que por espacio de veinte años ha tratado de destruir su salud, y quiere que su
médico le cure en ocho dias. El hábito de raciocinar mal se contrae con tanla facilidad, como una
enfermedad del estómago; cuando se trata de examinarle, ya no es tiempo. En el momento que se
mira á la religion como un proceso, como una cuestion de controversia, y se abroga uno las fun
ciones de juez, es muy peligroso que la balanza se incline por el lado mas cómodo. Me encuen
tro, dicen entonces, en un escepticismo necesario. Nada mas cierto; despues de haber tomado tan bue—
nas medidas para salir de este estado, seria admirable que hubieseis conseguido el fin.
Entre nosotros todo es moda y pasagero. En tiempo de Francisco I y sus sucesores, era muy
elegante el ser hugonote y antipapista; en la minoria de Luis XIV, era preciso ser conservador y anti
mazarino; durante la regencia, era muy bello declamar contra Roma y contra la bula; en el dia, es
un mérito el tenerse por filósofo incrédulo: ¿Qué nuevo error verá nacer el siglo próximo?
S. XVIII.
No seria lan odioso el asunto de que nos quejamos, sino engendrara tantas calumnias. Los sa
cerdotes, dicen nuestros adversarios, no son cristianos mas que por decencia é interés; su conducta
desmiente evidentemente su creencia; cuando se tienen relaciones familiares con ellos, pronto se ve que
no están muy cargados de artículos de fé 1.
Antes de responderá este reproche, veamos si los mismos filósofos están exentos de toda mira de am
bicion é interés.
Muchos llevan mas allá sus pretensiones. Segun ellos, todo escritor de genio es majistrado nato de su
patria; debe ilustrarla si puede; su derecho es su talento º. He aqui su mision fundada sobre un título au
iéntico, sobre la buena opinion que tienen de sí mismos. Los literatos, dicen, son los árbitros y dispensa
dores de la gloria 3; justo es que se reserven la mejor parte. Uno de ellos hace observar que en la China el
mérito literario eleva á los primeros puestos; y con gran sentimiento por su parte, no sucede lo mismo en
Francia 4. Otro dice que los filósofos quisieran acercarse á los soberanos; pero que la ambicion y las in
trigas de los curas los tienen desterrados de las córtes 5. Este desea que los sabios encuentren en las córtes
asilos honrosos, y obtengan en ellas la única y digna recompensa, la de contribuir con su crédito á la felici
dad de los pueblos, á los que hubieren enseñado la sabiduria. Pero si se quiere, dice, que no haya nada su—
perior á su genio, es preciso que tampoco haya nada superior á sus esperanzas º, Rara modestial Aquel,
preconiza los progresos que hubieran hecho las ciencias, si se hubiesen acordado al genio las recompensas
prodigadas á los sacerdotes 7. Unas veces estos hombres desinteresados se quejan de que los curas se han he
cho dueños de la educacion y de las riquezas, al paso que los trabajos y las lecciones de los filósofos no sir—
ven mas que para atraerlos la indignacion pública º. Otras opinan que es necesario despojar al sacerdo
cio para enriquecer á los filósofosº. Por último, concluyen, que si no se pueden curar á los hombres de sus
preocupaciones respecto á la religion, que piensen lo que quieran; pero que los príncipes y súbditos apren
dan por lo menos resistir algunas veces á las pasiones de los ministros odiosos de la religion 10.
Consolémonos: no es la religion lo que quieren los filósofos: son los privilegios, el crédito y los bienes de
la clerecia; si llegan á apoderarse de ellos, creerán en Dios, y todos los argumentos estarán resueltos.
S. XIX.
¿Cómo prueban que los sacerdoles no son cristianos mas que por interés? Por las faltas verdaderas ó
falsas en que han incurrido desde el nacimiento de la Iglesia. Se las acumulan á los papas, á los obispos y á
los ministros inferiores; los protestantes sobre todo no han dejado de producir buenas memorias acerca de esto.
Esto es lo que se llama quedarse á la mitad del camino; era preciso llevar la induccion hasta donde
puede llegar.
Existen hábiles jurisconsultos, cuya conducta no es un modelo de equidad; médicos, que despues de
haber diserlado sabiamente sobre la necesidad del régimen, no le observan mejor que sus enfermos; filóso—
fos, cuyas acciones y moral no siempre están en armonia. «Todas las veces, dice un escritor muy conocido,
que pienso en mi antigua simplicidad, no puedo menos de reirme. No leia un libro de moral ó filosofia sin que
me pareciese ver en él impresa el alma ó los principios del autor; tenia á todos estos graves escritores por
hombres honrados, sabios, virtuosos é irreprochables.... De su trato habia formado ideas angélicas, y no
me hubiera aproximado á la casa de cualquiera de ellos sino como á un santuario. No comprendia que pu
1 Gazetie literaire de Deux-Ponts, 1774, núm. 62, art. I. — 2 Hist. des établiss. des Eur p, dans, les Indes, t. VII, c. 2, p. 50.-
3 Encyclop., Gloire.- 4 III Dial. sur 1" ame, p. 66, - 5 Essai sur les, prejugés; c. 14, p. 378 - 6 0Euv. de J. J. Rousseau, . .
p. 3—7 syst. de la nat, í, c. 8 - 8 ibid., ti, c. 9 Christianisme devoie, pref, p. 28.- 10 Syst. de la nat., t, 11, c. 10, p. 319.
 XXIV
dieran estraviarse asegurando y demostrando tanto las cosas, ni hacer mal hablando siempre de sabiduría.
Por último, ha caido el velo ante mis ojos: se ha disipado esa preocupacion pueril, y es del único error que
me han curado 1.» Luego los filósofos no creen mas en la moral que los sacerdotes en la religion.
Este es el argumento mas fuerte. ¿Qué responden los filósofos? Que «cuando un hombre arrastrado por
sus pasiones parece olvidarse de sus principios, no se sigue que asi suceda en realidad, que no crea, ó que
sus principios sean falsos; que el lemperamento es mas fuerte que los sistemas y que las pasiones le hacen
preponderar sobre las creencias º.» De este modo el sacerdocio se encuentra justificado, ó por lo menos
escusado por sus propios denunciadores.
Supongamos que estos consigan seducir algunos, que hayan tenido relaciones demasiado familiares con
ellos ó con sus escritos, esto tan solo probará que esos débiles teólogos no saben lo suficiente para distin
guir la falsedad de los razonamientos de los incrédulos. Esta victoria no es tan completa ni brillante que
pueda hacerse de ella un trofeo en contra de la religion. Semejantes á los paganos que insultaban á los cris
tianos apóstatas, nuestros sábios filósofos no perdonan ni á los que les resisten ni á los que sucumbieron bajo
sus sofismas. Magnífica recompensa de la docilidad con que uno se presta á sus opiniones!
S. XX.
Todo el mundo conoce en el dia el resorte secreto que hace obrar á los hereges, cuando perturban la paz
de la Iglesia y de la sociedad; eran conducidos por el entusiasmo, por el fanatismo. Los filósofos deploraron
con elocuencia los estragos de ese vicio peligroso; asi han llamado á cualquiera especie de adhesion por una
religion verdadera ó falsa; los ateos tienen por fanáticos á todos los que creen en un Diosº. Si debe lla
marse fanatismo el falso celo engendrado en el foco de las pasiones, ¿podremos en ninguna ocasion desco
nocer los síntomas en los mismos que declaman contra él? Un hombre que se crea nacido para instruir á las
naciones, resuelto á arrostrar las leyes y la autoridad de los soberanos para establecer su doctrina, que
sea muy poco delicado en la eleccion de los medios y de los prosélitos, enemigo declarado de todos los que
se opongan á sus designios, tratando de hacerles odiosos y despreciables; siempre pronto á llegar hasta el
último esceso contra ellos, y á destruir la sociedad, si es necesario, para afirmar el reinado de sus opiniones,
si no es fanático, no sahemos con qué nombre calificarle.
Dicen que la libertad natural del espíritu humano, la independencia, menos amiga de la verdad que de
la novedad, hace muchas veces rechazar al cristianismo en su vejez, del mismo modo que le hizo adoptar en
su nacimiento 4. ¿Nos engañaremos ahora acerca del amor á la verdad que tienen nuestros adversarios y
del que están poseidos?
Álgunos han llevado la demencia hasta el punto de hacerse un mérito de su odio contra los defensores de
la religion. «Yo he sido, dice uno de ellos dirigiéndose á Dios mismo, yo he sido el enemigo de los que
oprimian á la sociedad.» Pretende, que si existe un Dios, debe pedir cuentas á un ateo de las invectivas que
ha vomitado contra los soberanos y los sacerdotesº. ¿Hubo jamás fanatismo mejor caracterizado?
El fanatismo, dice el oráculo de los incrédulos, es una locura religiosa, sombria y cruel; es una en
fermedad del entendimiento que se adquiere como la viruela; los libros no la comunican menos que las
reuniones y los discursos º. Llamémosle locura anti-religiosa, y la definicion no será menos exacta.
¿Es menos peligroso para una imaginacion viva concebir un odio ciego contra la religion, que entre
garse á un celo inconsiderado para defenderla? El primer esceso de estos encuentra mas acogida que el
segundo en las inclinaciones del corazon. Si el uno merece el nombre de fanatismo, ¿cómo llamaremos al otro?
Si un hombre sensato pudiera leer toda la arenga dirigida á Dios en el sistema de la naturaleza 7, se re-.
conoceria en ella el verdadero lenguaje de un energúmeno ó de un réprobo condenado al fuego eterno.
S. XXI.
¿Qué dirán acaso, os atreveis á acusar de fanatis mo á los filósofos que no predican mas que la toleran
cia, y que no cesan de declamar contra el furor con que se degüellan los hombres por las opiniones?
Ño nos dejemos alucinar con una ¿ º en el sentido de nuestros adversarios, significa
lo mismo que libertad en la boca de los sediciosos. «Nombre especioso, dice muy bien un antiguo; el que ha
1 Préface de Narcisse.— 2 Syst. de la nat., t. I, c. 12.p 32.- 3 Lettre de Trasib. à Leucippe, p. 25: Syst. de la nat., l. II, c. 7,
.224 - Hist. des établiss. des Europ. dans les Indes, t. VII, c. 2.- 5 Syst. de la nat., t. 11, c. 10, p. 303.- 6 Quest. sur l. Incycl.
Faluatisme.— 7 Syst. de la nat id. ib.
a <. S” Para fijar el sentido de una palabra que en boca de los º la usan es una verdadera antitesis, oigamos cómo se es
plica Sir William Cobbett en su Historia de la Reforma protestante en Inglaterra é Irlanda, carta VII: «Dos religiones, dos creencias
contrarias una a otra, y ambas verdaderas, es una cosa imposible, y esto supuesto ¿qué deberemos pensar de esas veinte ó cuarenta
»creencias distintas todas unas de otras? Si el deismo , y el ateismo son una cosa tan perversa en si misma y de efectos tan perniciosos
» que la ley castiga con una prision que suele durar años, y años al que públicamente profesa uno ú otro, ¿por qué esa misma ley tan
,justa en esta parte ha de tolerar el fomentar esa multitud de creencias, todas las cuales, menos una á lo menos, deben ser necesaria
»mente falsas?"cuando la ley no reconoce ni tolera mas de una sola religion, está bien que castigue al deista y al ateista; pero si re
»conoce y tolera mas de una, ya reconoce y tolera una falsa á lo menos; y quien tolera una religion notoriamente falsa, ¿por qué no
ha de tolerar el deismo y el ateismo?»....... - - - - - -

La ley no debe reconocer ni tolerar mas que una religion, ó no mezclarse en estas materias. El consejo de este ingenuo escritor de
bia seguirse a la letra por los gobiernos temporales que,, a pretesto de regalias de disciplina esterna, y de intervencion civil, llevan
su inspeccion incompeiente hasta invadir el sagrado de la administraciou y direccion espiritual). La ley católica es consecuente co
mo debe ser toda ley: dice que no hay mas que una religion verdadera, y por consiguiente castiga como criminales a todos los
profesan públicamente una opinion contraria a ella. Quien desee instruirse á fondo sobre el origen: progresos y término de la revolucion
religiosa que empezó en Alemania; invadiendo luego la furia los Paises Bajos, la Inglaterra, y la Francia, hasta consumar la horrible y
sangrienta tragedia del año 93 en la nacion vecina, puede leer, la historia del cismº de Inglaterra por el P. Itivadeneira: la histo
sia de las caraciones por Bossuet; la obrita que se ioma de la nota anterior, la historia de la revolucion religiosa en la Suiza occi
dental, escrita en francés por Aller, las memorias para serrirá la historia, eclesiástica del siglo XVIII, y mil otras obras ya impre
sas en castellano, algunas de las cuales se encuentran en la Biblioteca de religion.
 XXV
tratado de hacerse dueño y tiranizar á sus semejantes, jamas ha dejado de decorarse con tal espre
sion .» Ya sabemos lo que los ambiciosos entienden por eila; la libertad para sí, y la esclavitud para los
demas: esto es lo que precisamente vemos todos los dias. Cuando los filósofos eran deistas juzgaban al ateis
mo intolerable; decidieron que se le debia desterrar de la sociedad; despues que se hicieron ateos, dicen
que no puede sufrirse el deismo porque es intolerante, lo mismo que las religiónes reveladas. Estos doc
tores pacíficos están resueltos á, no establecer la tolerancia sino con respecto á sus propias opiniones, y
declarar la guerra á todos los demas. Si tienen el derecho de atacar á religion porque es intelerante,
¿ no nos fundamos menos al detestar la incredulidad,
el gl0 l.
porque es todavía menos tolerante que la
faros son los hombres, dice el libro del Espíritu, que si llegaran al poder no empleasen los tormen—
los para hacer adoptar en un todo sus opiniones.... Si no se cometen ciertos escesos mas que en las dispu
tas de religion , es porque las demas nó suministran los mismos pretestos ni los mismos medios para se
cruel. Solo á la impotencia se debe en general su moderacion 2.» El autor del Sistema de la naturaleza
confiesa tambien que es muy dificil dejar de incomodarse á favor de un objeto que se cree de la mayor im
portancia º Todo filósofo tiene á su sistema en el concepto del mas importante, y ya sabemos hasta qué
punto pueden llegar los escesos por defenderlo. Mas cuando leemos que «el que llegara á destruir la nocion
fatal de un Dios, o por lo menos á disminuir sus terribles influencias, seria, á no dudarlo, el amigo del gé
nero humano 4, » creemos no ir muy descaminados al desconfiar de semejante amistad.
No espereis paz, esclama uno de esos benignos filósofos, despues de haber vomitado seis páginas de in
jurias y de calumnias contra los sacerdotes; no espereis paz º; si desgraciadamente nos vemos precisados á
resolvernos por la guerra, nos sentimos con suficientes fuerzas para sostenerla todavia por mucho tiempo.
Al principio, los sectarios del siglo XVI eran cºrderos, pedian con humildad tolerancia; hechos fuer—
tes , se comportaron como leones furiosos; quisieron destruirlo todo. Los incrédulos, herederos de sus prin
cipios y de su odio, ¿ serian mas benignos én semejante caso? Lo que nuestros padres esperimentaron hace
cerca de dos siglos, nos dice lo bastante para conocer hasta dónde puede llegar el fánatismo anti-religioso.
La incredulidad, mas ó menos estendida y mas ó menos ambiciosa en sus pretensiones se le parece en un
todo; su genio es siempre el mismo º.

S. XXII.
Tranquilicémonos: la discordia basta para hacer abortar los designios de nuestros adversarios. Mientras
que se limitaron á predicar el deismo, se presentaron temibles; pusieron á los teólogos en la defensiva; pro
pusieron objeciones muchas veces bastante embarazosas; parecia que no atacaban á la moral; se veia siem
pre un Dios, una religion , una base en los deberes de la sociedad. Por medio de este artificio sedujeron al
principio un gran número de lectores muy poco instruidos para preveer las consecuencias funestas de sus
principios; mas tuvieron la poca destreza d presentarse con franqueza. Sustituyendo el deismo con el ma
terialismo, aplastaron la víbora sobre su mordedura, pusieron de manifiesto la discordancia de los siste
mas de incredulidad, los escesos á que conducen, la fragilidad del edificio que construyeran á tanta costa;
dieron lugar á los teólogos para demostrar que esta nueva hipótesis destruye hasta las raices las bases de la
moral, de la virtud, de los deberes del hombre y todos los vínculos de la sociedad: que siguiendo el hilo de
sus consecuencias es necesario detenerse y permanecer en la duda absoluta, resucilar la doctrina absurda
de los cirenáicos, las infamias de los cínicos y la pertinacia asquerosa de los pirrónicos.
No hay dos que piensen del mismo modo. Uno quiere sostener los restos vacilantes del deismo; otro pro
fesa el materialismo sin disfraz; algunos, dudosos entre estas dos opiniones, defienden ya la una, ya la
otra, sin saber de qué principio partir ni á cuál atenerse. Lo que uno establece, el otro lo destruye; no hay
una sola cuestion de hecho ó de raciocinio en la que estén acordes 7. ¿Es dificil de preveer la caida de una
república tan mal arreglada, en la que reina una anarquía y una confusion general? Si los deistas se reunen
á nosotros para combatir á los ateos, estos se aprovechan de nuestras armas para atacar á los deistas; po
driamos limitarnos á ser meros espectadores ¿
De este modo vela Dios sobre la religion que estableció él mismo; entrega á sus enemigos al espíritu
del vértigo. El Salmista trazó su destino al hablar de otro objeto. «¿Por qué causa se han embravecido tanto
las naciones, y los pueblos maquinan vanos proyectos? Hanse coligado los reyes de la tierra y se han confe
derado los príncipes contra el Señor y contra su Cristo. Rompamos, dijeron, sus ataduras, y sacudamos
lejos de nosotros su yugo. Mas aquel que reside en los cielos se burlará de ellos; se mofará de ellos el Señor.
En tonces les ¿ él en su indignacion, y los llenará de terror con su saña 8.»
Si ha permitido que los doctores de la mentira gozasen por algun tiempo de una reputacion brillante, el
juicio que ha ejercido sobre ellos debe hacer temblar á sus imitadores. Amenaza castigar con la misma se
¿ á los que se dejen seducir voluntariamente por sus prestigiosº.

1 Tácito hist. l. 4. n.73. 2 De l” Fº disc. c. 3, ¿ 103. -3 Syst. de la nat: t. II. c. 7 , 22. —, syst. de la
sat.t. I, c 3, p. 88; c. 10 p. 317 — 5 , Lettre á l” auteur du Dieu. des trois Siecles, p. 86 - 6 Annales º .t 3, n. 18,81.
1 El autor" del Emilio los ha pintado al natural, t. III. p. 25,37. - 8 Ps, 2. y 1. Trad. de Amat.) - º nº c. 2 y. 10 y 1.
TOMO l.
 l\|||||||||||||||l.
—o-o-o-o-o fºto-o-o-o-e—

bido el earámen de la religion, y llama á su doctrina

teismo.
PROLEGOIE-NOS.
6. Nosotros estamos convencidos del hecho de
-c-O-Q. Dºo
la revelacion por la Historia santa y por el testimonio
de los escritores sagrados contenido en la Biblia ó
1. La Teología es la ciencia ó el conocimiento Escritura santa. Contiene dos partes, el antiguo Tes
de Dios adquirido por la revelacion. Las nociones que tamento, y el nuevo; consideramos tanto á uno como á
se pueden formar de la divinidad por la razon per otro como la palabra de Dios, y llamamos á estos es
tenecen á la metafísica, llamada teología natural; es critos libros santos ó sagrados.
ta, como ya se puede suponer, no entra en nuestro plan. 7. El antiguo Teslamento contiene cuarenta y
La teología, como cualquiera otra ciencia, tiene sus cincolibros: los cinco primeros son de Moises, y se lla
pruebas particulares que se llaman lugares teológicos; man el Pentateuco; á saber: el Génesis, el Escodo, el Le
los que las profesan se denominan teólogos. vítico, los Números y el Deuteronomio; toman el nom
2. Como hay diferentes maneras de tratarla, se bre de heptateuco, cuando se añaden el de Josué y el
distingue la teología en positiva y escolástica, en de los Jueces, y octateuco añadiendo el de Ruth
teología polémica de los controversistas, en moral de 8. Los demas libros históricos son Josué, los
los casuistas que deciden de los casos de conciencia y Jueces, Ruth , los cuatro libros de los Reyes, de los
en teología mística de los autores ascéticos. cuales los dos primeros se llaman tambien libros de
3. La manera de estudiarla da lugar á diver— Samuel, dos libros de los Paralipómenos ó de las
sos términos, como escuela, curso de teología, facultad, crónicas, otros dos de Esdras; el segundo se deno
grados, graduado, bachiller, licenciado, doctor, doctor mina tambien de Nehemias, los de Tobias, de Judit y
jubilado, ubiquista, profesor, cátedra de teología, teo de Estér.
lógico, tesis, tentativa, mayor, menor aulica, sorbó— 9. Los Libros sapienciales ó libros de moral, lla
nica, vespertina, resumpta, robertina, laureandos; mados por los Griegos panaretas, son Job, los Salmos
términos usados principalmente en la universidad de ó el Salterio, los Proberbios, el Eclesiastés, el Cántico,
Paris y en la de la Sorbona. la Sabiduria y el Eclesiástico; los autores de estos li
l. Pues que la teología está fundada sobre la bros son conocidos bajo el nombre de hagiógrafos.
revelacion, la primera cuestion que ocurre á cualquier 10. Se denominan libros proféticos los de Isaias,
teólogo es el saber si Dios se ha revelado á los hom Jeremias, con sus Lamentaciones, Baruch, Ezequiel
bres. Se prueba la necesidad de esta luz sobre-natural y Daniel; estos son los cuatros Profetas mayores. Los
por la debilidad de la razon humana , por la multitud doce menores, son Oseas, Joel, Amós, Abdias, Jo
de errores en que han caido los pueblos infieles, y de más, Miqueas, Nahum , Habacuc, Sofonias, Ageo,
que no han podido preservarse los mismos filó Zacarias y Malaquias. A estos siguen dos libros de los
S00S, Macabeos que son una obra histórica. Tenemos como
5. Que Dios haya hablado á los hombres, es un auténticas las historias de Susana, de Bel y del dra
hecho, y se prueba con otros que le sirven de gon, de los niños en el horno, que forman parte del
testimonio por las circunstancias de que estuvo acom de Daniel.
yañado, que se llaman motivos de credibilidad; tales 11. El nuevo Testamento contiene veinte y siete
son los milagros, de los cuales sostenemos la certidum obras: cuatro erangelios ó historias de la vida de Je
bre, las profecias, cuyo cumplimiento probamos, las sucristo, escritos por cuatro evangelistas, á saber:
virtudes de los que han recibido una mision divina, &c. S. Mateo, S. Marcos, S. Lucas y S. Juan, y por
Todas estas pruebas forman una demostracion moral último, las Actas de los apóstoles.
ó extrínseca invencible. A las lecturas de Bayle se 12. Catorce epístolas ó cartas de S. Pablo: una á
deben muchas buenas obras sobre esta materia. Los los Romanos, dos á los Corintios, una á los Gálatas,
deistas y los demas incrédulos no tienen razon cuando á los de Efeso, á los Filipenses, y á los Colosenses, dos
rechazan toda revelacion y dicen que les está prohi— á los Tesalonicenses, dos á Timoteo, una á Tito, á
 -
XXVII
Filemon y á los Hebreos. Ademas la epístola de San mo tambien las clementinas. las constituciones apostó
tiago, dos de S. Pedro, tres de S. Juan, la de San licas, las recogniciones, el falso Abdias, el testamen
Judas y el Apocalipsis ó revelacion hecha á S. Juan. to de los doce patriarcas, el libro de Enoch, etc.
13. Se llama cánon la lista de esas diversas obras; 18. , Pueden tambien serle muy útiles algunos
y libros canónicos los que la Iglesia comprende en libros de los judios, tales como el Talmud, que con—
ella: se distinguen en proto-canónicos y deutero-ca tiene la Mischna y la Gemara, el Cozri; por lo que
nónicos. respecta á la Masora ó el trabajo de los Masoretas, los
14. Todos estos escritos son el objeto de la críti Deuterosis y el Machasor de nada le sirve su estudio:
ca sagrada, que consiste en discutir y probar la au - todayia le importa menos la cabala y la gematria y
tenticidad, la verdad y la inspiracion de estos libros; las diferentes sectas de Jos rabinos llamados gaones y
son las obras autógrafas, apócrifas, supuestas ó pseu guéonim, etc.
donónimas, como losfalsos evangelios, etc. Esta cien 19. No es indispensable poseer todos estos cono
cia exige el estudio de las lenguas en que está escrito cimientos preliminares antes de empezará estudiar la
el tearto, las versiones, los Targumenes ó paráfrasis, teologia; se adquieren en detalle y poco á poco, á
los setenta y la vulgata. Estas lenguas son el hebreo ó medida que se adelanta en su estudio.
samaritano, el caldeo, el siriaco, la helenistico, el ára
be, el etiope, el cofto, el persa, el armenio, el griego y CUERPO DE LA TEOLOGÍA.
el latin. El texto y las versiones principales están
comprendidas en las Biblias poliglotas, las que Oríge 20. El Objeto de la teologia es Dios considerado
nes habia proyectado al hacer sus tetraplos, he ca ya en sí mismo, ya en sus obras. Bajo el primeras—
plos y octaplos. Este estudio de las concordancias ó ecto, nuestros conocimientos son muy limitados;
armonias es de grande utilidad. Los críticos se ocu bajo el segundo son algo mas estensos. Dios se ha re
pan tambien de los contestos, variantes ó diferentes velado bajo los títulos de creador y conservador de
todas las cosas, de legislador supremo, de juez ven
lecciones, de la division de los libros santos en capítu
los y en versículos y de la poesia de los Hebreos. gador del crímen y remunerador de la virtud, de re
15. La crítica sagrada distingue los diversos sen dentor y salvador del hombre, de santificador de las
tidos de la Escritura santa, el sentido literal, el figu almas y de fin último. Tales son los augustos atri—
butos de que se han ocupado los teólogos, y que pre
rado ó místico, alegórico ó anogógico y los idiotismos,
hebraismos ó helenismos. Tambien tiene por objeto sentan la division natural de un curso completo de
conocer los comentarios y los comentadores ó iniér teología.
pretes de los libros santos, los filólogos, el estilo bíbli
co, elC. Dios en sa mismo.
16. Efectivamente, la filologia debe considerarse
como una parte de la crítica sagrada; pero mas bien 21. Es el mismo Dios considerado en su natura—
tiene por objeto las palabras que las cosas. Examina: leza divina, en sus perfecciones, en sus atributos,
1." Las voces hebreas, caldeas ó siriacas que ya absolutos, ya relativos. Los primeros son la esei
se han conservado en las versiones de que se sirven los dad ó la necesidad de ser espresada por el nombre
judios, como abba, abra, Adam, Bahem, Behemoth, Jehovah ó Tetragrammaton, la eternidad, la unidad,
Belial, Cerethi y Phelelhi, Cohen, Corban, Gog y la espiritualidad, la simplicidad, la infinidad, la in
Magog, hosanna, Keri y Retib, Hesitah , Leviathan, mensidad, la inmutabilidad, la libertad, la inteligen
Mammona, Maozim , Maran atha, Médraschim, cia, la voluntad y la felicidad. Dios es un espíritu pu
Megilloth, Mézuzoth, Muzach, Néchiloth, Neginoth, ro, un ser inmaterial; estas cualidades no tienen
Niddin, Nohestan, Paradis, Parasche, Racca, san - ninguna relacion con las criaturas; no se distinguen
hédrin, Sarabella, sátrapa, Schélkinah, Schibboleth, del ser divino como creian los porretanos: no es en un
Scilo, ó Schiloth, Sethim, Socoth-benoth, Thartach, sentido abusivo en el que Dios es un ser perfecto, y no
Thau, Totapoth, etc. - es cierto que la idea que tenemos de él sea una teo
2.º Las voces griegas que se encuentran en los tropia ó un antropomorfismo espiritual.
escritores sagrados ó eclesiásticos, como hodégos, mes 22. La existencia de Dios es atacada por los ateos,
résis, economia, Parasceve, parhermeneusis, pedago. los naterialistas, los espinosistas y los escépticos. Su
go, peripsema, phyloutéres, pneuma, podere, poly unidad lo ha sido por los polyteistas, los valentinia
mitum, presbitero, prosehuchis, pigme, python, scé. nos, los bardesanistas y los colarbasianos, su espiri
nopegia y otras que se pondrán en su lugar. tualidad por los antropomorfitas, los audianos, los
3." . Las voces latinas cuya significacion es es honunción itas, los hermianos ó sacianos; su inmu—
traordinaria, como olla, opus plumariumn, etc. tabilidad y libertad por los filósofos, que le han con
º Las voces que, traducidas á nuestra lengua, siderado como el alma del mundo.
pueden tener diversos significados asciet de á tanto 23. Para evitar estos errores, es preciso tomar
su número que seria muy prolijo el colocarlas en es en su verdadero sentido el de las antropologias, el de
lugar; mas se pondrán muchas de ellas en este las espresiones de la Escritura que atribuyen á Dios
(17l. miembros corporales, ojos, orejas, una fisonomia,
17. Un teólogo debe saber la historia eclesiástica, una boca, un corazon, pies y manos; ó acciones hu
ero no debe aprenderla en las centurias de Magde— manas, como la voz, la palabra y la vista: el de las
¿ Eusebio y Hegesipo son mejºres guias. Le es antropopatias ó de las frases que le atribuyen las"o
importante conocer cuáles son obras antigmas autén siones humanas, como el amor, el ódio, la piedad ó
ticas, y las que son supuestas ó pseudónimas, asi co la compasion, la cólera, los celos y la venganza.
 XXVIIl
2. Sabemos por la revelacion que Dios es uno 28. 2. º Dios ha criado el mundo visible y todo lo
en tres personas, Padre, Hijo y Espíritu Santo; mis que encierra. Diversos hereges han criticado sin ra
terio que se entiende bajo el nombre de Santísima zon el hearameron ó la obra de seis dias, y han ad
Trinidad: que el Hijo ó el Verbo, por via de genera mitido el dualismo ó dos principios creadores; estos
cion, ¿e del Padre; que el Espíritu—Santo pro hereges son los cerdonianos, cerintios, valentinianos,
cede del Padre y del Hijo, y que existe entre estas gnósticos, antitactas, carpocacianos, archonticos, mar
personas divinas una coegalidad y una coeternidad cionitas, maniqueos, baanitas, braquitas, cataristas,
perfectas, y por consiguiente, que el Verbo es homoou sererianos, priscilianistas, paulicanos, poplicanos,
ios o consistancia a Padre. De aquí tomaron origen albigenses, etc. Tampoco han hecho bien los incrédulos
los términos hipostasis, actos inmanentes, paternidad, modernos, al repelir sus objeciones y negar las cau
filiacion, espiracion, procesion, misiones, relacion, sas finales. Lo que dice Moises del cielo ó del firma
circumincesion. Este dogma nada tiene de comun con mento, de la tierra ó del globo, de las aguas del abis
la pretendida Trinidad de Platon. La Iglesia profesa mo, de los astros, del dia, de la noche, etc. en nada
su creencia por medio de la fiesta de la Santisima contradicen las leyes físicas.
Trinidad, por las cofradias erigidas bajo su nombre, 29. 3. º Dios ha criado al hombre á su imagen
por el Trisagio y la docologia: la señal de la cruz, el y semejanza ; le ha dado un alma espiritual, in
número de tres, afectado en la mayor parte de las ce mortal, dolada del libre albedrio ó de libertad, exenta
remonias, etc. Le aplica tambien con razon el pasage de toda necesidad, así como tambien de coaccion; es—
de los tres testigos, de que habla S. Juan. ta alma no ha salido de la substancia divina por emana
-

25. No es de admirar que este misterio haya sido cion, Adan ha sido llamado con justicia protoplasta,
atacado por un gran número de hereges, 1. º Los ó primer creado; de donde se deduce que todos los
Sabelianos, discípulos de Sabellius, confundian las per hombres son hermanos y parientes. No puede admitir
sonas y las reducian á una sola; tambien han sido se el error de los preadamitas, el de los origenistas, y
llamados acéfalos, angelitas, damianistas, marcelia protoctistas que creian en la preearistencia de las al—
nos, noecianos, paulianistas, samosauienos, patripasia las, el de los thnétopsychicas que sostenian su mor—
nos, théopasquitas, praaceanos, etc. 2." Los alogas talidad, y el de los arábigos que piensan que muere el
despues los arrianos negaron la divinidad del Verbo; alma y resucita.
se entendieron bajo diferentes nombres como vere 30. Por su providencia Dios conserva á sus cria
mos en el número 57. 3." Los macedonianos, l'a— turas, y mantiene en el universo el órden físico que
mados tambien pneutmatomacos, han atacado igual ha establecido. De esto sacamos la mocion de muchos
mente la divinidad del Espíritu Santo. ..." Estos atributos divinos, relativos á las criaturas, tales son
tres errores han sido renovados por los socinianos, la ciencia de todas las cosas, aun de los acontecimien
conocidos con los nombres de unitarios, antitrinita tos futuros, que se llama presciencia ó prevision; las
rios, hermanos poloneses, colegianos, heshusianos, ser voluntades antecedentes ó consecuentes, los decretos
retistas, etc. 5." Los triteistas, los canonitas, Abelar— absolutos ó condicionales, y la predeterminacion que
do y algunos otros han hecho tres dioses diferentes de sostienen algunos teólogos. De lo que se deduce que
las tres personas divinas. 6.º Los griegos y los arme nada hay fortuito ó sucede por casualidad respeclo de
nius cismáticos sostienen que el Espíritu Santo pro Dios, que no existe el destino, y que los Agnoetas ca
cede del Padre y no del Hijo. yeron en el error. De aquí también la bondad y sa
biduria, que atribuimos á Dios, los nombres de Ab,
ll. Abba, padre, bienhechor, Adonay ó Señor que
Dios criador y conservador. nosotros le damos.
3. La desigualdad que Dios ha establecido en—
26. Los antiguos filósofos no admitieron la crea— tre las criaturas, sus imperfecciones y el mal que
cion propiamente dicha, pero los libros santos nos la existe en el mundo, en nada derogan iña divi
enseñan y demuestran en el número septenario ó la na. Propiamente hablando, no existen bien ni mal abso
semana; por esto han sido condenados los albaneses y lutos sino por comparacion; los términos de perfec
los bañoleses, que creian al mundo eterno, los hermia. cion é imperfeccion, de felicidad y de desgracia, son
nos, hermogenianos y seleucianos que sostenian la ma juramente relativos, y no es indispensable que el hon
teria ele: na. ¿ sea impecable. Ninguna criatura está enteramente
27. Dios ha criado 1.º los ángeles, espíritus pu— privada de los beneficios naturales ni de las gracias
ros, sistancias espirituales, incorporales, inmateria sobrenaturales. No es necesario recurrir al optimismo
les: unos son buenos y otros malos. Los primeros, se— para justicar la conducta de Dios por las aflicciones
gun la creencia de la Iglesia, están distribuidos en que envia; para probar que no es un efecto de par—
nueve órdenes ó coros, á saber: en ángeles, arcánge cialidad, de odio y aversion, para responder á las
les, principados, potestades, tronos, dominaciones, objeciones de los marcionitas, maniqueos y théoca
virtudes, querubines y serafines, de donde viene el tagnostas, y refutar á los colucianos, que decian que
término seráfico. Dios ha dado á cada hombre un án— los males no provienen de Dios.
gel de la guarda, pero con frecuencia se ha servido
de los ángeles para egecutar sus venganzas; la Escri
tura nos dice los nombres de algunos como Miguel ó
Micael, Gabriel, Rafael y Abaddon. Los ángeles ma
los se con prebuen bajo el nombre de demonios, dia
llos, Satanás, Asmodeo, Boelccbub, etc.
 - XXIX
lli. momento el género humano es una masa de per
dicion y condenacion.
Dios, legislador, remunerador y ven 36. La historia santa, hablando de Abel, Cain
gador. Enós y otros patriarcas, nos enseña que Dios mismo
les habia prescrito la creencia, el culto y la moral
32. El principio de toda ley es la voluntad de que exigia de ellos, y que les reveló una religion.
Dios, soberano legislador; ella impone á las criaturas Ellos creyeron en un solo Dios criador, conservador,
inteligentes deberes ú obligaciones morales; establece bienhechor y legislador de los hombres, asi como la
la diferencia entre el bien y el mal moral, lo justo é inmortalidad del alma y la vida futura: á nadie mas
injusto, la virtud y el vicio; da la fuerza y la sancion que á Dios rindieron la gloria ó el culto supremo de
á las leyes humanas. De aqui deducimos las nociones adoracion ó de la tria.
de ofensa, de falta, de pecado actual, mortal ó venial, 37. Dieron testimonio de este culto por los sig
coluntario, de muerte, contra el Espíritu -Santo, de nos que se llaman, ritos, ceremonias. liturgia, culto
crímen, culpa y lo que se llama sindéresis. Esta vo esterior. Con efecto, las prosternaciones, la oracion,
luntad suprema que nosotros denominamos ley natu los juramentos en nombre de Dios, los votos, las con —
ral nos es intimada por la razon, la conciencia ó el sagraciones, las ofrendas, los sacrificios, la eleccion de
sentimiento moral; de aquí se derivan tambien el de las víctimas, la distincion de los animales en puros ó
recho natural, el de gentes, y los derechos y de impuros, el fuego sagrado, las libaciones ó esiones
beres respectivos de los hombres que viven en so— de agua y otros licores, los perfumes, el incienso, las
ciedad. abluciones, las espiaciones, las abstinencias, el ayuno,
33 Esta ley no tendria ninguna fuerza, si Dios el canto, los himnos ó cánticos, la danza, las neome
no hubiera establecido recompensas para la virtud, y nias ó reuniones á la luna nueva, las fiestas, las comi
penas, castigos y suplicios para el crímen: en esto das comunes, las exequias ó funerales de los difun
consiste la justicia, santidad y fidelidad de Dios en tos, el respeto á las sepulturas ó sepulcros, forman
sus promesas. Esta justicia no exige que el crímen arte del culto primitivo, y se encuentran en todas
sea siempre castigado, y la virtud recompensada en as naciones.
este mundo, sino en la otra cida: la revelacion nos 38. Por las costumbres de los patriarcas y por
enseña que estas penas y recompensas son eternas, el libro de Job conocemos la piedad, la resignacion
que el temor de incurrir en las primeras es un senti en la providencia, la paciencia, la confianza en Dios,
miento laudable. Nos dice que Dios no abandona, cie— el temor de desagradarle, la santidad del matrimo—
ga ni endurece positivamente á ninguno, que no cas— nio, la fidelidad de los esposos, el poder paternal, la
tiga la ignorancia involuntaria; solo son reprobados buena educacion de los hijos, su respeto y obedien
los malos: que las pruebas y tentaciones son solo oca cia con relacion á los padres, la union entre los her—
sion y no la causa del pecado: que Dios lo permite, inanos y los parientes, la humanidad para con los
pero que no lo hace cometer. Nos dice tambien que esclavos, la caridad, la justicia, la compasion respec
a justicia de Dios en nada deroga su misericordia, to de los hombres, todo lo que se denomina obras de
que perdona cuando quiere, que está siempre mas misericordia, alabadas y admiradas como actos de
inclinado á perdonar que á castigar y que sus mis. virtud; la impiedad, la blasfemia, el perjurio, la im
mas amenazas son rasgos de su bondad. pudicicia, la prostitucion, la sodomia, el adulterio, el
3. Dios ha egercido la augusta funcion de legis— robo, el asesinalo ú homicidio, la opresion de los po
lador desde el principio del mundo, dándonos leyes bres, de las viudas, de los huérfanos, etc. se conside
p sitiras. Crio á Adan y á Eva en el estado de inocen ran como crímenes y actos abominables; y con mas
cia y felicidad, y no en el de pura naturaleza; los razon todavia la creldad de los antropófagos. Pero
colocó en el paraiso terrenal, y los prohibió tocar las guerras particulares estaban permitidas.
al arbol de la ciencia del bien y del mal. Seduci— 39. Esta religion primitiva, que se llama ley na
dos por el demonio, revestido bajo la forma de ser tural, no es la religion natural en el sentido que la
juiente, desobedecieron, y cayeron del estado de ino ha tomado el hombre por sus raciocinios. Dios mis—
encia: esto es lo que se llama la caida de Adan. Dios mo la habia revelado; y ella es natural en el sentido
los condenó, asi como á su posteridad, al trabajo, á de que es muy conveniente á la naturaleza de Dios
las aflicciones, á los sufrimientos, á la muerte, y les y la del hombre en las circunstancias en que se es—
o vó del fruto del arbol de la cida. De aquí provi tableció. Tal es la primera época de la revelacion.
tieron el pecado original y la concupiscencia con que Esta religion debia sostenerse, y perpetuarse por la
acemos todos. S. Agustin defendió victoriosamente tradicion doméstica; pero los hombres no tardaron
este dogma contra los pelagianos que le atacaban: en separarse de ella. Efectivamente la Escritura ha—
llamaban á su vez á los cristianos traducianos, y ce una distincion entre los hijos de Dios y los de los
sostenían que Dios no puede castigar á los hijos por hombres; nos habla de la corrupcion de los hombres
e pecado de su padre. antidilucianos y de los gigantes, de la que Noé supo
5. Pero alies de condenar á Adan, Dios le pro preservase; del dilucio universal y del arca, del
metio un salvador, t n mediador y una redencion: es crímen de Can hijo de Noé, de la maldicion fulmi
la promesa fue llamada el proto-erangélico, ó la pri nada contra Canaam y su posteridad, de la torre
uera nueva de la salud de los hombres. Tal es la pri construida por los Noaquidas, de la confusion de las
rrera alianza de Dios con el género humano, que ha lenguas atestiguada por el nombre de Babel, y de la
sido negada por los luleranos llamados substanciarios dispersion.
y por lo los aquellos que sostienen que desde aquel A
0. Poco despues la Escritura nos manifiesta el
 XXX
origen del politeismo y de la idolatria en el culto de los sueños, de los presagios, de los estigmatas, todas
los astros ó de la armada del cielo, culto llamado sa— las prácticas de los paganos, como tambien el consul
baismo, practicado por los sabeanos ó zabianos, por tará los adivinos y á los muertos, honrar al difunto
los sampléanos, llamados tambien eliognósticos é hyp y la comida del muerto; y de aqui la impureza con—
sistarianos. Los gentiles ó paganos tomaron por dioses traida por el contacto de los adº
los pretendidos Génios, inteligencias ó demonios, de 5. Prohibió igualmente toda clase de impudicicia,
los que suponian, que animaban todas las partes de la de injusticia ó acepcion de personas con respecto al
naturaleza y las almas de los muertos; los han repre prójimo, y por el contrario mandó y recomendó todas
sentado por terafines ó ídolos, y los rendian adora las obras de caridad y humanidad. A todo esto aña
cion. De aquí tomaron origen todas las supersticiones, dió Dios leyes civiles, judiciarias, políticas y milita
las apoteosis, la mágia, las hechicerias y sortilegios, res. Las que se refieren al año sabático, al año ju
los encantamientos, la adicinacion, la fé en los sue bilativo ó de remision, á las ciudades de refugio, al
fios, los augurios, los arúspices y los sacrificios de casamiento de una viuda llamada Ibum, á la flagela
las víctimas humanas, etc. Todas las prácticas destina cion de cuarenta azotes, á la lapidacion, á los venga
das al principio para honrar al verdadero Dios las dores de la sangre, etc., á la esclavitud, al juicio de
profanaron para dar culto á los dioses imaginarios. zelo y á los servidores ó esclavos; asi es que el gobier
41. En esta misma edad del mundo, coloca la no de los israelitas fué al principio una teocracia.
historia santa la ruida de Sodoma, la formacion del l6. Pero las leyes ceremoniales eran en mayor nú
lago asfaltites, llamado mar Muerto, el castigo de la mero. Ordenaban:
muger de Lot, cambiada en estátua, los incestos de 1." Las ofrendas, como la presentacion de los
Lol, de los que nacieron los Ammonitas y los Moabi que nacian primero ó de los ¿ de las fami
tas. Aunque den á los patriarcas el nombre de justos, las, de las primicias, de la yerba antes de la co
sus costumbres no eran absolutamente irreprensibles; secha, de los panes de proposicion, de los perfumes ó
la poligamia bastante frecuente entre ellos no era sin del incienso.
embargo ni un crímen ni un concubinaje. Las cos— 2." De los sacrificios y de la eleccion de las víc
tumbres de los Amorreos, de los Cananeos y de los timas, los holocaustos, los sacrificios por el pecado,
Egipcios eran todavia menos puras. Entonces la Pro— el del cabron emisario llamado zazel, el de la vaca
videncia divina pensaba en un gran designio. roja, etc.
2. Con efecto la vocacion de Abraham atestigua 3.º De las abstinencias, como la de la carne de
da por la circuncision va acompañada de magníficas puerco, de la sangre de las carnes ahogadas, y por
¿ los viajes de este patriarca, su mansion consiguiente la eleccion de las carnes.
ajo la encina ó el teresbinto de Mambré, la historia ...º De las espiaciones y de las purificaciones
de Sara, sobrina y no hermana de Abraham, la de para borrar las manchas ó las impurezas legales ó
Agar, de lsmael, de Isaac, de Jacob, de sus doce hijos, tambien las de las pruebas, como la de las aguas de
geles de las doce tribus, de José, del testamento de los celos.
Jacob, etc. son el preludio de una segunda alianza que 5.º De las consagraciones, como la que se hacia
Dios queria formar, de una segunda ley positiva mas con el aceite de uncion, las de los Natineos, Nazare—
eslensa que la primera, y que se habia hecho nece— nos ó del Nazareato, de los votos; pero el anatema
saria en el estado en que se encontraba entonces el era una execracion.
género humano. Esta es la segunda época de la re 6." De las fiestas, el sábado, las neomenias, la
velacion. pascua, pentecostés, la fiesta de los tabernáculos, de
3, . Este grande acontecimiento fué precedido por las espiaciones ó perdon, de las trompetas, la fiesta
la mision de Moises, atestiguada por sus milagros, de las suertes llamada purim ó phurim. Las encenias
por las plagas de Egipto, por la institucion de la pas— ó la fiesta de la dedicacion del templo se instituyeron
cua o del Cordero pascual, por el paso del mar Rojo, mas recientemente.
por la llegada de los israelitas al desierto próximo al 7. Para llenar el culto divino con mas dignidad,
monte Sinai, por otra multitud de prodigios, tales Moises construyó un tabernáculo en forma de templo,
como la columna de nubes, el maná del desierto, etc. y coloco en él el sancta sanctorum, arca de la alían.-
De suerte que por eleccion de Dios, los descendientes za y un propiciatorio; mandó hacer altares, una tabla
de Abraham llamados hebreos, israelitas y despues de los panes de proposicion y un candelero de oro:
Judios, llegaron á ser el pueblo de Dios, no debe acu— Aaron su hermano fué elegido por Dios para ser el
sárseles de haber robado á los ejipcios, de haber sido soberano pontífice. Las vestiduras propias de su dig
una horda de árabes beduinos, etc. nidad eran una túnica de lino, una tiara, una lámina
4. Las leyes que Dios les dió por medio de Moi de oro colocada sobre su frente, un efod superhume
ses, y las promesas que les hizo, se denominan el an ral, un pectoral ó racional al que estaba unido el
tiguo Testamento, la ley antigua, la lev escrita, la oráculo, llamado urin y thummim. Los levitas fueron
ley de Moisés, la religion judáica, el judaismo. Dios los encargados de las funciones del sacerdocio, siendo
no les reveló nuevos dogmas, los que aprendieron simples sacerdotes.
por la tradicion de sus padres eran suficientes; mas 8. No tardaron los israelistas en hacerse idóla
renovó los mandamientos de la ley primitiva conte— tras adorando al becerro de oro Hijoun ó Rempham,
nidos en el decálogo, y los hizo grabar sobre dos ta Baal, Astaroth, ó Astarteo, Beelphegor. Chamos,
blas, y como una nueva sancion añadió la promesa Moloch, la reina del cielo y la armada del cielo. Dios
de las recompensas temporales. Prohibió rigorosa castigó sus murmuraciones y sublevaciones, principal
mente la idolatría, la superticion de los astros, de mente la de Coré, y su complacencia respecto de los
 XXXI
Madianitas. No fueron acusados de haber adorado al IV.
dragon, sino á la serpiente de metal bajo los reyes. Los
autores profanos, que denominaron á los Judios celí Dios redentor y salvador.
colas y les atribuyeron el culto de un pretendido Dios
Anocichyta, conocian mal su religion, lo mismo que 5. Dios habia prometido ó nuestro primer padre
los que reprobaron sus oraciones. Adan un Redentor, y á los judios un Mesias: ya le
9. Despues de la muerte de Moisés, Josué go vemos en las profecias de o , Abraham, y de Jacob
bernó á este pueblo bajo el nombre de juez, le hizo al hablar del cetro de Judá, de Moises, Balaam y Da
pasar el Jordan, tomó a Jericó, detuvo al sol en su vid en sus salmos; de Isaias cuando habla de Emma
carrera, hizo la guerra á los cananeos y conquistó la nuel y de la pasion del Salvador; de Daniel en las
Palestina, tierra prometida á Abraham. De todas las cuatro monarquias y las 70 semanas de Ageo y Ma
guerras de los judios, las principales son: la que hi laquias. Habia llegado el tiempo de su cumplimiento
cieron á los benjamitas de Gabaa, y en la que Jahel ue era cuando los pueblos se encontraban en estado
llevó la victoria. Aod, Jephté, Samson y Samuel fue ¿ formar entre sí una sociedad relijiosa universal:
ron célebres entre los jueces; con poca razon se le la ley de Moises, ley nacional, destinada á un solo pue
acusó al último por el asesinato de Agag. blo, no podia ya subsistir: era preciso una ley nue—
56. Los israelitas quisieron tener reyes: fue el pri va, una ley de gracia, una nueva alianza, ó un nue
mero Saul, que consultó á la pitonisa de Endor; fue vo Testamento para establecer sobre la tierra el reino
reemplazado por David, bajo el pontificado de Abiathar de los cielos, ó el reino de Dios; esta es la tercera
época de la revelacion. Jesu-Cristo cumplió realmen
i dereprendido
Achimelech; David castigó á los Ammonitas y
por sus faltas por el profeta Nathan. te los antiguos oráculos en el sentido más literal; los
Salomon, su hijo y sucesor, fue visitado por la reina apóstoles y evangelistas estuvieron en su derecho al
Saba: hizo construir el templo de Jerusalen, en el citarlos y al aplicárselos, sin tener necesidad de ti
cual, ademas de las cosas que habian estado en el ta. os ni de profecias típicas, y todavia menos de los li
bernáculo, existian un mar de bronee y un velo mag ¿ sibílicos.
nífico; se admiraban en él la lonja, las pastophorias, 55. Bajo el reinado de Augusto y de uno de los
las galerias llamadas peribolos, el pináculo, la pla tres Herodes, el Verbo divino, segunda persona de la
ta-forma etc. Salomon estableció porteros, músicos santísima Trinidad, fue encarnado, tomando un cuer
y otros oficios para el servicio del templo, cuyas ri po y un alma en el seno de la Virjen Maria por obra
quezas y magnificencia sobrepujaban á las de los del Espíritu Santo , y nació en Belen en un pesebre
templos del paganismo. en la misma época del empadronamiento de la Judea;
51. Bajo Roboam un cisma de diez tribus separó su genealojía, trazada por dos evanjelistas, prueha
el reino de Israel del de Judá. Bajo , los reyes idóla que era descendiente de Abrahan y David. Tuvo por
tras se presentaron muchos profetas falsos que decian precursor á san Juan Bautista, hijo del sacerdote Za—
que sus sueños eran visiones proféticas, pero Dios carías; se celebra la degollacion del primero.
envió á otros verdaderos, tales como Elías, Eliseo, 56. De esta union hipostática ó sustancial de
Isaias Jeremias, etc. Le acusan sin razon á Oseas de la divinidad en una sola persona resulta el com
haber hecho imprecaciones á Eliseo, de haver sido puesto theandrico , Jesu-Cristo theantropo, Dios y
cruel, y haber permitido á Naaman el culto de Rem hombre, hijo de Dios é hijo del hombre, por consi
non, dios de los sirios. uiente sus acciones se denominan dei-viriles; de
52. Para castigar las muchas idolatrias de su ¿ atribuírsele dos naturalezas, dos voluntades y
¿ Dios los entregó á los asirios y les hizo pa dos operaciones, todas las cualidades de la natura
ecer una trasmigracion y una cautividad en Babi leza divina y de la naturaleza humana; esto es lo
lonia. En este intérvalo aconteció el milagro de los que los teólogos llaman comunicacion de idiomas:
tres niños salvados en el horno y el castigo de Nabu consecuencia evidente de la encarnacion.
codonosor. A los setenta años Dios volvió á conducir 57 , La profundidad de este, misterio y las hu
su pueblo á la Judea. La resistencia de los macabeos millaciones del verbo divino han dado marjen a
y sus victorias sobre los reyes de Siria forman una muchas sectas heréticas. 1." Unos han negado la
época célebre en la historia judáica. divinidad de Jesu-Cristo, como los ceriúticos , los
53. Entonces formaron diversas sectas entre los gnósticos barbeliotes, los bonosiacos ó bonosianos,
judios. Aparecieron los asidianos, los fariseos, los pero principalmente, los arrianos, llamados tambien
saduceos los samaritanos, adoradores de Nergal, los acasianos, adopcianos, aecianos, agnoistas ó agnoe
esenios, los terapeutas, los galiléos, los sebusianos y tas, anomeos, eudoxianos, eunonsianos, eunomio
herodianos; se establecieron las sinagogas, los escri eusipgnios, eusebianos execionistas, hetereusianos
bas ó doctores de la ley; se distinguian los judios ge medio-arrianos, ó senis-anianos, fotinios, porfiria
nitos, y los proselitos. La distincion de los rabbanistas nos, psatirianos homuncionistas, etc. Tuvieron
y caraitas es mas moderna; los recabitas, de que ha sucesores á los socinianos. Estos hereges han lla
bló Jeremias, no eran una secta. Los rabbanislas fue mado á los ortodoxos huminicolas, homousianos,
ron los que forjaron la pretendida ley oral contenida homouneronales, etc. La fórmula maerostica de los
en el mischna No es cierto que los autores profanos eusebianos no contenia ningun error.
hayan adquirido de los judios algunos de sus conoci— 2.º Otros negaron la realidad , de su carne, y
Inientos. por consiguiente de sus acciones humanas y pa
decimientos; se han comprendido bajo el nombre
de apelitas, docetas o docitas, aflartodocetas, apo
 XXXII
linaristas, ascetas barules, basilidienos, dimoeri tiplicó los panes, anduvo sobre las aguas del lagº
tas, hadrianistas; incorruptibles, simonianos. -
de Genezaret, calmó las tempestades, curó á una
3.° Muchos han sostenido, que se confundian Cananea, hizo que se secara una higuera con solo
en Jesu-Cristo las dos naturalezas en una ; como una palabra, resucitó los muertos y con especia
los eutiquianos llamados , tambien monoficianos lidad á Lázaro, su amigo, manifestó su gloria por
metaforistas, metanjismonistas, sinousiastas, ga medio de una transfiguracion. Conocia los pensa
yanistas, timocianos, trópicos, corruptícolas, jaco mientos mas recónditos, y predecia el porvenir.
bitas, coplas ó coptos, sirianos. Los partidarios 6. La moral que predicó, principalmente en
del enótico publicado á favor de los eutiquianos su sernon sobre la montaña, fué santa y sublime;
se llamaron pacíficos y titubeadores. De aquí to redujo toda la ley y los profetas á dos mantamien
maron origen los monotelistas que no admitían tos, al amor de Dios y del prógimo, aun de los ene
en Jesu-Cristo mas que una volutilad; se ha ha migos. A estos añadió los consejos de perfeccion.
blado mucho del ectesis y del tipo que favore mandó la abnegacion ó el rentinciar á sí mismo, el
cia esta herejia. amor á la pobreza, á las humillaciones y á los pa
.." Algunos suponían en Jesu-Cristo dos decimientos; instruyó al pueblo por medio de pa
personas: tales fueron los paulianislas, llamados rábolas, dió acogida á los publicanos y á todos los
tambien abrahamienos , los nestorianos ó por otro pecadores, perdonó á la mujer adúltera, y no ha
nombre cristolistas, cacinzarienos, staurolatras, en blo del suplicio sino para anunciar á sus discípu
el dia caldeos ó nestorianos orientales , cristianos los lo que debia sucederle.
de Slo, Tomás. Los tres capítulos hicieron mu 62. Sus lecciones las confirmaba con su egemplo
cho ruido en la disputa de los nestorianos, cu y por la práctica de todas las virtudes: observaba las
yo error fue renovado en el siglo octavo por Eli fiestas y las ceremonias de la ley; pagaba los tributos
pando y Felix de Urjel. y sufria las injurias; sus enemigos mismos jamas hi
5." Los cerdonianos, los cerintios y una par cieron sospechosa su conducta respecto de la Magda
te de los ebionitas, sostenian que Jesu-Cristo ha lena y de las demas mugeres que escuchaban su doc
bia nacido como los demas hombres y que José trina. Mandaba oir á los escribas, á los fariseos, á los
era su padre. príncipes de los sacerdotes, sentados en la cátedra de
6.° Se han conocido eonianos que publica Moisés; pero refutó sus falsas tradiciones, les repro
ban que un cierto Eon era el hijo de Dios; los chó su orgullo, su avaricia, hipocresia, el asesinato
isocristas que decian que los apóstoles eran igua de Zacarias, etc. Esto hizo que se aumentara su odio y
les á Jesu-Cristo. sus celos, le trataron de imposlor y seductor, le acusa
58. La Iglesia ha proscripto todos estos erro ros de hacer milagros en nombre de Beelcebub; y
res, y continua profesando su fé, respecto de la formaron el proyecto de perderle.
encarnacion, ya por medio de las fiestas que ce— 63. Jesus lo sabia y lo habia predicho. Antes
lebra, como la Anunciacion , el tiempo del Ad de morir, celebró en el cenáculo la cena con sus discí
viento y la festividad de la O, la Natividad pulos, comió con ellos el cordero pascual, les lavó los
ó nacimiento del Salvador llamada Navidad, abre pies, é instituyó la eucaristía ó la pascua cristiana.
viatura Emmanuel , su Circuncision y la fstivi Con tres de ellos se retiró al jardin de las olivas, y
dad del Santo Nombre de Jesus, espresado mu— tuvo en él una agonia, aceptó el caliz de su pasion,
chas veces por la voz lchris, la Epifania llamada demostrando de este modo que estaba dolado de una
tambien Teofania y Teocia, monumento de la ado carne que podia padecer, se levantó con valor, se en
racion de Jesus por los magos, la fiesta de los tregó á sus enemigos, y se presentó delante de los
santos Inocentes, la presentacion de Jesus en el tribunales de Jerusalen. Dió testimonio de su divini
templo, y la purificacion de su Santa Madre, lla dad, fué condenado á muerte, azotado y coronado de
mada tambien Candelaria, y en oriente pentesis; espinas, conducido al calcario para ser crucificado ó
ya por las oraciones que recitamos como el ánje clavado en la cruz.
lus ó perdon etc. 6. Así se obró el misterio de la redencion del
59. Jesus, despues de haber pasado su infan género humano. Jesu-Cristo es la víctima de propi
cia en la oscuridad, recibió el bautismo, se reti— ciacion por los pecados de todo el mundo, el funda
ró al desierto y fue tentado, declaró su mision, y dor de una nueva alianza; por medio de su muerte
edicó el Evanjelio ó la buena nueva de la sa— y sangre satisfizo de un modo rigoroso á la justicia
ud de los hombres. Elijió para apóstoles y prime divina: es en el sentido mas exacto el salvador, el re
ros discípulos á doce pescadores. Simon por sobre dentor y el mediador de los hombres. En su muerte
nombre Celas ó Pedro, y Andres su hermano, San se cubrio la Judea de tinieblas, tembló la tierra, se
tiago el mayor hijo del Cebedeo, y Juan su herma— rompieron las piedras del calrario, se desgarró el celo
no, Felipe, Bartolomé, Tomás, Mateo, Santiago el del templo y resucitaron muchos muertos.
menor hijo de Alfeo, Judas ó Tadeo, Simon el ca— 65. Jesus fué enterrado y embalsamado por Nico
naneo, y Judas Iscariote. demus y José de Arimatea, y envuelto en una sábana
60. Jesus probó su mision por los milagros santa ó sudario entero, colocándole despues en una
y principalmente por las curaciones que hizo; tumba ó sepulcro excavado en la misma roca. La
éambió el agua en vino en las bodas de Caná, Iglesia cree que su alma bajó á los infiernos, pero
sanó á diferentes ciegos, mudos, sordos, cojos condena el error de los infernales y sepulcrales. En
y paralíticos en Cafarnam y en otras partes; la época señalada para la resurreccion, á los tres dias,
dejó libres á algunos demoniacos ó poseidos, mul salió Jesus del sepulcro, se presentó vivo, se deió
 xxxiil
tocar, multiplicó las apariciones, bebió y comió con tbres han dado testimonio del evangelio; apesar de los
sus discípulos para que se convenciesen de que habia clamores de los elcesaitas, su gran número está com
resucitado verdaderamente. La Pascua de resurrec— probado por los martirologios y losnecrologos; el mar
cion, el cirio pascual y el domingo fueron instituidos tirio de la legion de Tebas no es una fábula. La Iglesia
en memoria de este milagro alestiguado por José, his— no empezó a gozar de alguna paz, sino á favor de
loriador Judio, y por las actas de Pilatos; pero los los edictos de Constantino, convertido por una vi
cuartodecimantes ó protopascuitas fueron condenados sion celeste; es falso que el cristianismo haya deb.—
por no haber querido conformarse al uso de la Igle do su propagacion á la proteccion de los emperadores.
sia. J sus prometió á sus apóstoles el Espíritu-Santo 71. Sus enemigos no han hecho mas que inven
paráclito ó consolador, y subió al cielo en presencia tar calumnias sobre los agapes ó comidas de caridad,
suya el dia de su ascencion. y los agapetos y besos de paz; para probar las pre
66. Despues de haber recibido el Espíritu-Santo lendidas represalias de que los cristianos han echa
el dia de Pentecostes, de cuya fiesta traen erigen los do mano para con sus perseguidores, no han podi
nombres de pentecostano y pentecostales, los apóstoles do citar otro ejemplo de falso celo mas que el de
publicaron estos hechos no avergonzándose del es Abdas. Desde su origen se ha dado á conocer la san
cándalo ni de la locura de la cruz. Hicieron discípu tidad y divinidad de nuestra religion por el cam—
los y fundaron una iglesia en Jerusalen. Se estable. bio que ha obrado en todos los climas y en las cos
ció la comunidad de los bienes entre los fieles, lo que tumbres de todos los pueblos, por la caridad y pa—
dió lugar al castigo de Ananias y Safira. Los Após— ciencia de los cristianos. el cuidado de los pobres, de
toles ordenaron á algunos diáconos y en particu— las viudas, de los huérfanos, de los enfermos, de los
lar á S. Esteban que disputó contra los libertinos ó niños abandonados y de los esclavos; por la seve—
libertos;
77r lrtir.
su muerte le mereció el nombre de proto ridad de la disciplina respecto de los lapsos, após
tatas ó renegados, que tambien se llaman libeláti
Bien pronto se formó otra iglesia en Antioquia, en cos—mitentes, traidores. Estos desgraciados nunca fue
la que los fieles tomaron el nombre de cristianos, lla ron en gran número, y ninguno perjudicó á la re—
maban á su religion cristianismo, y á los creyentes ligion que abandonaba. -

neófitos; al multiplicarse su número se ha formado la 72. Los filósofos, y principalmente los écticos,
cristiandad. se unieron á los perseguidores; Celso, Porfirio y Ju
67. S. Pablo convertido fue á predicar á la Ara liano son los mas célebres la mayor parte han des—
bia; los demas apóstoles despues de su dispersion for— honrado su filosofía por la teurgia ó la magia.
maron diferentes iglesias de judios helemitas y gentiles, 73. En general, los filósofos mal convertidos son
desengañados del paganismo, principalmente las igle— los primeros heresiarcas, ó los que han emitido las
sias de la Grecia. S Pedro y S Pablo fundaron la de primeras heregias ; las sectas de los simonianos enti
Roma, y S. Marcos la de Alejandria. Nada puede quitas, discípulos de Simon el mago, los valentis
hacernos creer la historia de Abgaro y su conversion. nianos, ridículos por sus eonos y por los nombres
Hubo en Jerusalen un concilio ú asamblea del Colegio bárbaros que les daban, como acamoth , saldabaoth
apóstolico para condenar á los ebionitas ó judaizan etc. los gnosticos. llamados canitas, setianos, ofitas,
tes, llamados tambien nazarenos, astacienos, mine marcosianos, masvotenios, heracleonitas, Melquisede
nos pasageros, sabatarios ó sabacianos, que sostenian cianos, fibionitas, ptolemaitas, secundianos, etc. losque
la necesidad de las observancias legales. No se trato se han denominado apelitas, apostólicos, basilidianos,
en él de los Idolotitas, sino de la abstinencia de la cleobianos, docetas, menandrienos, hematitas, gnosi
sangre. Tambien fueron condenados despues los etc. macos, etc. tienen el mismo origen.
nofronos ó hipsistarienos, que mezclaban los ritos 7. Han tenido por adversarios á los padres de
del paganismo con los del cristianismo. En aquellos la Iglesia los apologistas del cristianis no. No men
primeros tiempos eran comunes entre los fieles los do cionaremos mas que los principales; seria muy lar—
nes del Espíritu-Santo; ha perseverado en la Iglesia go si hubiéramos de enumerar todos ellos. Cave,
el don de los milagros; y ha tenido muchos santos tau Dupin, Tillemont, D. Ceillier, nos los dan á cono
maturgos. cer; los antiguos fueron acusados de platonismo con
68. La mayor parte de los Apóstoles y parientes injusticia, asi como haber mezclado todos la metafí
de Jes -Cristo sufrieron el martirio por atestiguar sica con la teologia.
la verdad de los hechos que publicaban; pero ha Deben colocarse en el primer siglo y en primer tér
bian trasmitido su mision á otros para continuar su mino los Padres apostólicos, S. Bernabé, S. Cle
obra, y livieron sucesores el celo apostólico de mente papa, S. Ignacio, S. Policarpo, llermas,
los misioneros jamás se estinguirá en la verdadera autor del libro del pastor. En el 2 º á S. Justino,
Iglesia. s
Taciano, Atenagoras, Hermias, S. Teofilo de Antio—
69. Los judios han sido castigados justamente quía y á S. Ireneo. En el 3 º Minucius Felix, S. Cle
por el deicidio que cometieron; los escesos de sus ce mente de Alejandria, Tertuliano, célebre por su Apo—
la lores durante el sitio de Jerusalen estremecen; des logético y su libro de las Prescripciones, S. Hipólito
de aquella época parecen entregados al espíritu del de Porto, Orígenes, S. Cipriano, S. Gregorio Tau -
vértigo; los errores y visiones con que los rabinos han malurgo. En el ... º Lactancio, Arnolbio, Eusebio,
llenado el Talmud, su cabala, ematria, gilguró me S. Hilario de Porliers, S. Atanasio, S. Basilio, S. As
temps cosis, etc. son puerilidades. tero, S. Efrem, S. Cirilo de Jerusalen, S. Gregorio Na.
•

70. Desde su origen, el cristianis no ha esperi cianceno, S. Gregorio de Niza, S. Ambrosio, S. Pa—
mentado persecuciones sangrientas, millares de már ciano, Sulpicio Severo. En el 5. º S. Epifanio, San
TOM0 l. 5
 XXXIV
Juan Crisóstomo, S. Gerónimo, S. Agustin, S. Pauli y de un centro de anidad en hecho de religion, la
no, Casiano, S. Isidoro de Pelusa ó de Daniseta , San ilusion de la pretendida reforma que querian hacer,
Cirilo de Alejandria, Vicente de Lerins, S. Pedro Cri lo absurdo de su distincion entre los tradicionarios y
sólogo, Teodoreto, S. Leon, S.Euguero de Leon, San estuarios, la falsedad de su tolerancia, la inutilidad de
Próspero y S. Hilario de Arlés. En el 6, º Boecio, S. los trabajos de los sincretistas ó conciliadores, la irre
Fulgencio, y S. Cesareo de Arlés. En el 7. º S. Gre ligion de los latitudinarios ó colegianos.
gorio el grande, S. Isidoro de Sevilla y S. Mácsimo 78. La Iglesia tambien ha reprobado los cismas y
Abad. En el 8.º Beda y S. Juan Damasceno. Los au los cismáticos, los disertantes ó isidentes, los nova
tores mas modernos se entienden mas bien bajo el cianos y sabacianos, los melecianos, los donatistas
nombre de escritores eclesiásticos que de Padres ó doc divididos en claudianistas, pelilianos, maximianistas
tores de la Iglesia. Por tales se conocen en el 9. º si y rogalistas, sus circonceliones, los cicelas, los acéa
glo Alcuino, Agobardo de Lyon, Rabano-Mauro, los ó caucobardilas, los agonísticas, biblistas, bor
Pascardo—Ralberto, Hincmar de Reims; en el 10. º S. relistas, los independientes, los investigadores y tro—
Odon de Cluni y OEcumenius, y en el 11. º S. Odi pitas. -

lon, Fulberto de Chartres, S. Pedro Dumiano, Lan— Uno de los cismas mas nolables es el que separó los
franc; en el 12. º S. Anselmo, Ives de Chartres, Hu— griegos de la iglesia latina: aquellos se distinguen en
gos, Ricardo de S. Victor y S. Bernardo. En este mis aronitas o griegos reunidos y en melguitas ó no reu
mo siglo, Pedro Lombardo, llamado el maestro de las nidos, entre los cuales se encuentran los mingrelianos;
sentencias, dió origen á la teología escolástica. el famoso Hebed Jesu ó Abdissi era maronita.
En el 13. º Sto. Tomas formó la escuela de los Del mismo modo se distinguen en el cisma de Ingla
Tomistas; S. Buenaventura, su contemporáneo, y Scot terra los anglicanos 6 episcopales que se llaman la al
en el 1. º siglo son los gefes de la escuela de los la iglesia, y los presbiterianos, no conformistas, puri
Scotislas. En el 15. º fue la época del renacimiento tarios ó separatislas, divididos en muchas sectas.
de las letras; Gerson Toslado, obispo de Avila, el car 79. Al recomendar la Iglesia el celo por la reli
denal Besarion y otra multitud de escritores contro gion, no autoriza ni la intolerancia, ni la persecucion,
versistas se hicieron célebres; el 16. º se señaló por ni la violencia contra los infieles, cuando son pacíficos;
el nacimiento de la pretendida reforma y por las pa pero reduce la tolerancia y la libertad de conciencia á
noplias de los controversistas. sus justos límites. La inquisicion denominada el Santo
75. En ningun siglo han faltado defensores á la Oficio, y su conduela para con los herejes negativos,
doctrina cristiana ; para reprimir á los innovadores los autos de fe o suplicios á que los condena no estan
la Iglesia ha celebrado concilios generales, oecumé— ordenados por la lo Los ilacianos, perseguidos
nicos ó plenarios y concilios particulares ó síno por condenados.
ron los priscilianislas, no eslaban autorizados, y fue
v.

dos. Entre los concilios generales, el de Nicea, el

Quinisexto ó in Trullo y el concilio de Trento, que ha V.- Dios santifica «lor.
sido el último, fueron los mas notables. Siempre ha
estado persuadida, que en estas asambleas, Jesui-Cris 80. Por el modo con que Dios ha establecido,
to cumplia la promesa que la habia hecho de acor sostiene y perpelua el cristianismo, es evidente que
darla la asistencia del Espíritu-Santo. Por lo tanto quiere santificar al hombre y conducirle á la salud
los pastores asi reunidos dieron decretos ó cánones elerna por la creencia de los dogmas, por la práctica
sobre el dogma, confesiones ó profesiones de té, han de la moral y del culto, y por la sumision á la discipli
manifestado cuál era la doctrina ortodoxa, heterodoxa na de esta religion: cuatro medios, de los que la teolo—
falsa, errónea, herélica, blasfematoria ó escandalosa. gia tiene que demostrar la necesidad y los efectos.
Anatemalizaron a los hetesiarcas y á los hereges, prin
cipalmente á los relapsos; reprobaron sus concilábu - Dogmas ó artículos de fe.
los, censuraron y condenaron sus libros, exigieron de 8. Los principales dogmas ó artículos de fe del
ellos la abjuracion de sus errores, les prohibieron cristianismo estan contenidos en el símbolo de los
dogmatizar, borraron sus nombles de los dípticos y les Apóstoles ó el Credo; pero no es cierto que el símbolo
negaron las cartas formadas ó carlas de comunion. atribuido áS. Atanasio sea verdaderaniete suyo. M.
76. Opusieron á estos doctores falsos no solo chos de sus dogmas son misterios incomprensibles; de
libros y el testo de la Escritura Santa sino la tradi aqui no se deducen que sean increibles Algunos de
cion católica ó universal, venida de los apóstoles, ellos se llaman artículos fundamentales, que todo
atestiguada por todas las Iglesias particulares, y prin cristiano debe saber y creer con una fe implícita ó es—
cipalmente por la cátedea de S. Pedro ó la Iglesia plícita; el deber de ios pastores y de los predicadores
romana. Tambien han demostrado cuál es la regla el ¿ al pueblo en los catecismos, sermones,
de fé, cómo se conserva el depósito de la fé y la 10" llas, plálicas, panegíricos ó exho taci
comunion de la fé, en qué sentido la Iglesia es una, ¿ ¿ elC. laciones, en las
santa, católica, apostólica, visible, infalible, aun en 82. Uno de los artículos de n estra fe es que la
los hechos dogmáticos, en qué consiste esta unidad, salud elerna no puede conseguirse sino p0r los méritos
esta infalibilidad, etc. Refularon la opinion de los in de Jesucrito; que tenemos necesidad dejauxilio sobre
invisibles.
natural de la gracia interior, no solo para hacer bue—
77. Por su parte los hereges por el encadena— las obras, sino para formar buenos deseos para
miento y progreso de sus errores, por sus divisiones obrar nuestra conversion, y aun para tener el principio
en muchas seclas, han manifestado el peligro del de la le, que la perseverancia final es un puro don de
raciocinio particular, la necesidad de una autoridad Dios, que sin la gracia habitual ó santificante, no ec—
 XXXV

siste en el hombre ningun mérito de condignidad. Es, res: la Iglesia ha decidido contra ellos que los Sacra
pues, defé que la gracia actuales puramente gratuita, mentos producen la gracia ear opere operato.
no es la recompensa de nuestros méritos ni el efecto de 87. El primero de los Sacramentos es el bautis
nuestros esfuerzos naturales; que no solo es concomi mo: borra el pecado original, nos despoja del hom
tante y cooperante sino preveniente, y sin que por esto bre viejo, nos dá la gracia de adopcion, imprime el
sea necesitante. No habria mérilo ni demérito sino carácter indeleble ó de cristiano, de hijo de Dios
fuéramos libres. Tales son las verdades que S. Agustin y de su Iglesia, obra una palingenesia ó regene
ha defendido victoriosamente contra los pelagianos y racion, y hace contraer afinidades espirituales.
los semi-pelagianos ó masilianos, y que la Iglesia ha Nada tiene de comun con el bautismo de los hemero—
confirmado por sus decretos, baptistas ó pretendidos cristianos de S. Juan. Dife—
83. Pero no ha decidido en qué consiste la efi rentes hereges llamados catabaptistas, adrianistas,
cacia de la gracia, si es en una delectacion victorio— ambrosianos, arnaldistas, petrojoanistas, desollados;
sa, en una predeterminacion física, o en la congrui los anabaptistas, llamados tambien mennonistas,
dad de la gracia: cuál es la diferencia esencial entre monasterianos, gabrielitas, pies-desnudos, divididos
la gracia eficaz y la suficiente; si el decreto de pre en clanculares y manifestarios, en sanguinarios y pa
destinacion de los elegidos supone la prevision de sus cíficos, los petrobrusianos, los rebaptizantes, etc. han
méritos ó si la precede; si la reprobacion de los ma negado los unos la necesidad del bautismo, han re
los es positiva á negativa, etc. chazado el poedobautismo ó el bautismo de los ni—
84. Se han renovado con frecuencia y duran ñós; los otros han desconocido los efectos, alterado
todavia las disputas acerca de estas cuestiones: en la forma, etc.
el 5." siglo los predestinaciones, en el 9.º Gotes 88. En otro tiempo se administraba este Sacra —
calc y en el 16.” las diferentes sectas de protestan.- mento por medio de la inmersion y no por la asper—
tes y los doctores católicos las han agitado con mu sion, en el dia lo es por infusion, que es lo que sig
cho calor. Los confesionistas ó luteranos que siguen la nifica echar el agua de socorro. Los preparativos han
confesion de Augsbourgo, y que algunos llaman ise dado origen á los nombres de catequesis, catecismo
bianos, tuvieron entre ellos interimistas que adopta ó instruccion, catequista; catecúmeno, catecumena
ban el ínterin publicado por Cárlos V, filipistas secta do, escrutinio, prosélitos, Los términos de paratesis,
rios de Melanchthon y osiandrianos. Los calvinistas, exorcismo, votos del bautismo, crisma, lampróforos,
llamados en Francia hugonotes, protestantes, reli pascua annotina, padrino, madrina, ahijado, ahijada,
gionarios, se dividen en universalistas y particula etc. se refieren á las ceremonias. La Iglesia jamas ha
ristas, en infralapsarios y supralapsarios, en armi aprobado la conducta de los clínicos ó grabatarios,
nianos ó remontrantes y en gomaristas ó contra-re que difieren su bautismo hasta la hora de la muerte,
montrantes, en pajonistas y calixtinos, en predestina 89. La confirmacion nos comunica los dones del
dores terministas, etc. En nuestros dias los partidarios Espíritu-Sanio, el valor para confesar nuestra fé, el
del bayanismo, del Jansenismo ó de Agustin de Jan celo por la religion; los incrédulos al llamar á este
senio, los apelantes de la constitucion ó bula unige celo analismo, entusiasmo é intolerancia, dan á co—
nitus, defensores del famoso caso de conciencia y nocer su necesidad. La materia de este sacramento es
opuestos al formulario, han tomado falsamente el la quirotenia ó imposicion de las manos y la uncion
nombre de agustinianos, y han combatido contra los del santo crisma que es el myron de los griegos.
molinistas ó congruistas, y los llamaron constitucio 90. Bajo las especies ó accidentes del pan y del
narios, pero las convulsiones y los convulsionarios vino, la eucaristia contiene el cuerpo y sangre de Je
han echado sobre el partido de los apelantes y so sucristo; tal ha sido desde su principio la fé de la
bre su apelacion un borron de ridículeces que jamas Iglesia. Por consiguiente ha condenado :
podrá desechar. - 1.º A, todos los que han atacado la presencia
85. Entre los medios de santificacion que Jesu real, los berengarios, petrobrusianos, los calvinistas
Cristo ha instituido, los mas eficaces son los Sacra llamados antiluteranos, arrhébonarios, enérgicos ó
mentos: aplicándonos por su medio los méritos del energistas, figuristas, sacramentarios, significativos,
divino Salvador, obran en nosotros la justificacion, y
zwinglianos, capuciati y á todos aquellos que han
nos ponen en el estado de gracia y de justicia habi disputado sin razon alguna sobre la voz antitipo.
tual, pero el hombre no se ha hecho justo por la 2." A los que niegan la transubstanciacion , los
imputacion de la justicia y de los méritos de Jesu husitas ó hermanos de Bohemia, los luteranos llama—
cristo, y la gracia santificante no es inadmisible. dos empanadores, consubstanciadores, ubiquistas, ade
86. Los Sacramentos participan á la vez del dog senarios, los unos adiaforistas ó indiferentes, los otros
ma, de la moral, del culto y de la disciplina; es antiadiaforistas, los pastelereros, etc. que admiten to
preciso conocer la institucion, el número, el minis dos en la eucaristia la consubstanciacion.
iro, la materia, la forma, los efectos, las disposicio 3." Los que ultrajan la adoracion del Santísimo
nes que exigen, la intencion necesaria para que sean Sacramento, reprueban el sacrificio de la misa y la
válidos, y las ceremonias con que se acompañan. elevacion de la hostia, y sostienen que en ella no hay
Sobre todos estos puntos, los ascodrusos, los mani inmolacion; la Iglesia enseña lo contrario, atestigua
queos, llamados balgaros, cataros, jovinianos, pata su fé por medio de la fiesta del corpus, por las devo—
rinos, henriquianos, albigenses, célebres por sus cua ciones de la adoracion perpetua de las cuarenta ho—
drillas de asesinos, los priscialianistas, los lolar ras, por las bendiciones ó reservas: por el viático lle
dos, los vodeuses, los wiclefitas, los prolestantes, vado á los enfermos y por las funciones del que le lleva.
bisacramentales ó trisacramentarios enseñaron erro .." Los que han cámbíado la materia del sacra
 XXXVI
umente, los artotiritas, los barsanienos ó semidulitas, Los órdenes menores de acólito, lector, exorcista y
los hidroparastas ó acuarienses. Con justa razon se portero, estan destinados á mantener la decencia del
sirve la Iglesia latina del pan acymo ú hostia, á pe— culto divino; aunque los energúmenos, los poseidos y
sar de los clamores de los griegos que nosotros lla los endemoniados no sean tan comunes en el dia co—
mamos Fermentarios, como ellos á nosolros acymistas. mo en otro tiempo, de aqui no se deduce que las po
5." Los que sostienen la necesidad de la comu— sesiones ó demonomoniacos hayan sido enfermedades
nion bajo las dos especies de la copa ó del caliz, y que naturales, y que los errorcismos sean un abuso.
se han denominado calictinos; seria muy injusto que Por medio del orden la Iglesia da la mision á sus
los abstemios estuvieran privados de la participacion ministros y establece su sucesion; exige la vocacion de
de la mesa del Señor. ellos, d los prepara para el simple sacerdocio por
6.º. Los estercoranistas, cuyo error atribuyen los medio de la tonsura y por los egercicios de los semi
incrédulos á los católicos. 7tarl O.S.

La Iglesia no aprueba tampoco ninguno de los es
cesos en que se ha incurrido en pro ó en contra de la
comunion frecuente; muchas veces ha castigado á los
clérigos culpables reduciéndolos á la comunion laical
ó á la comunion por mano de otro.
91. Importa poco que la penitencia se denomine
metanoéa, reconciliacion, arrepentimiento, etc., con
tal que se convenga en que es un sacramentoque qui
ta los pecados y los borra. Exige ciertos actos por
parte del penitente que son la contricion ó al menos la
atricion, que nace del temor filial, la confesion auri
cular ó erhomologesis y la satisfaccion. Estos actos su
ponen el eacámen de conciencia, y la contricionó com
puncion encierra el firme proposito de nunca mas pe
car. El sacramento obra su efecto por medio de la ab
solucion, concebida en forma judiciaria ó en forma de
precativa. Para absolver válidamente el sacerdote tie
ne necesidad de poderesó de aprobacion: estos pode
res pueden ser limitados para ¿ casos reservados, ó
quilados en ciertos casos por entredicho ó prohibicion.
La satisfaccion exige siempre la restitucion y repara
cion del daño causado al prójimo.
92. En la práctica de la penitencia, la Iglesia no
admite ni la relajacion ni el rigor de los novacianos,
de los montanistas, de los luciferianos, de los hofma
nistas, ni el pretendido consuelo de los albigenses.
Aunque aprueba los antiguos cánones penitenciales ó
regla del penitencial, la penitencia pública usada en
otro tiempo sostiene que no es absolutamente nece
saria; por consiguiente admite los perdones ó indul
encias plenarias ó limitadas, los breves y bulas de
a penitenciaria que las conceden, el jubileo y las es
taciones; no condena la indulgencia de la porciúncula.
Manda el secreto inviolable, y recomienda la pruden
cia á los confesores, á los directores de conciencia y
á los penitenciarios; deplora la desgracia de los pe
cadores que mueren impenitentes.
93. La eartremauncion está destinada para qui
tar los restos del pecado, fortificar los enfermos, y
suavizar las angustias de la agonia y de la muerte;
con este objeto se han establecido las oraciones y las
cofradias de los agonizantes.
9. Por el sacramento del orden por la quiroto
nia ó imoosicion de las manos, la Iglesia consagra á
Dios ministros para el culto divino, obispos, sacerdo
tes, diáconos y sub-diáconos; esto es lo que se llama
órdenes mayores; los tres primeros forman la gerarquia.
Es una cosa constante entre los teólogos católi
cos, que el episcopado es un sacramento y un órden
diferente del simple sacerdocio; lo mismo acontece
con el sub-diaconado; el estado de las diaconisas no
era ni un órden ni un sacramento.
Se ha disputado acerca de la validez de las orde
naciones anglicanas y del rito del orden de los ingle
ses: la Iglesia ha decidido suficientemente la cues
tion obligando á los anglicanos que entran en su se—
no á una reordenacion,
96. El sacramento del matrimonio es necesario
para perpetuar la sociedad de los fieles, la bendicion
nupcial para santificar los empeños de los esposos, y
para hacer que los deberes de los padres, de las ma
dres y de los hijos sean mas sagrados; se prepara
este sacramento por medio de los esponsales. Debe
proscribirse la poligamia y el divorcio, pero las segun
das nupcias no son ilegítimas. La Iglesia ha conde
nado tambien por una parte la licencia de los baralo
tes, de los comunicantes, de los poligamistas, etc. y
por otra la temeridad de los que condenan el matri
monio como los abstinentes, llamados abelitas, agi
nianos, apostólicos, apotácticos, los tacianistas, encra
tistas ó cátaros, dositeanos, hieracitas, lucianistas,
priscilianistas y euslatianos, que es preciso no con
fundir con los partidarios de Eustatio, patriarca de
Antioquia. No aprueba los matrimonios contraidos
antes de la edad de la pubertad; quiere que las mu
geres no sean reputadas como esclavas.
Moral cristiana.
97. La divinidad del cristianismo se demuestra prin
cipalmente por la santidad y sublimidad de su mo
ral. Esta moral, enseñada en el Evangelio, prescribe
todas las virtudes y proscribe todos los vicios; esta
blece de un modo claro todos los deberes del hombre
respecto de Dios, para con el prójimo, y para consigo
mismo; reprime todas las pasiones, prohibiendo no
solo las acciones criminales sino los pensamientos
y los deseos que tienden al crimen, y aun los pecados
e omision, sobre todo el escándalo ó los malos egem
plos. Reduce todos nuestros deberes á dos grandes
preceptos, á saber; el del amor de Dios y del prójimo;
no se satisface con los sentimientos habituales de las
diferentes virtudes, exige nuestros actos y que ma
nifestemos nuestros sentimientos por medio de las
buenas obras. Desenvuelve y perfecciona la moral
natural que nunca fue bien conocida añtes de la pu
blicacion del Evangelio.
98. Entre las virtudes, las que se denominan teo
logales, son las principales; tales son, la fé, la espe
ranza y la caridad. La fé es un homenage que debe
mos á la veracidad soberana de Dios, cuando se dig
na instruirnos; escluye no solola incredulidad, la in
fidelidad, la apostasía y la herejía, sino la duda ó el
escepticismo voluntario, la ¿ entre la ver
dad y el error, la profesion de las religiones particu
 XXXVII
lares falsas. La esperanza cristiana se funda en las crímenes opuestos á la castidad, tales como la forni
promesas de Dios, en su verdad ó fidelidad para cum cacion, el adulterio, el incesto, la sodomia, la pede
plirlas y en los méritos de Jesucristo; esta confian rastia y bestialidad, sino que ademas el Evangelio
za es un medio entre la presuncion y la desesperacion, honra la continencia, las vírgenes y la virginidad;
entre la temeridad de tentar á Dios y la desconfianza nos da á conocer los peligros del lujo, de los espectá—
de su bondad; destierra el temor escesivo, los escrú culos, de la lectura de novelas y libros obscenos;
pulos mal fundados y la melancolía religiosa; pro sin que por esto nos obligue á usar del saco ó cilicio,
cura la paz interior y la alegría del Espíritu-Santo. los azotes ni los escesos de los flagelantes.
Se entiende por caridad no solo el amor de Dios sino 101. Del mismo modo que hay virtudes princi
el del prójimo. Bajo el primer aspecto esta virtud en s de que son consecuencias las demas, tambien
cierra el reconocimiento respecto de Dios, la sumision ay vicios ó pecados que se llaman capitales: el
y obediencia á sus órdenes y la resignacion á sus de Evangelio no permite ni escusa á ninguno. Reprime,
cretos. Bajo el segundo se estiende mas allá que la 1." la soberbia, la vanagloria, el amor propio escesi
justicia porque contiene la humanidad y la piedad; vo, la ambicion de los honores; nos recomienda la hu
no solo ordena la limosna sino cualquiera especie de mildad, la modestia y aun el amorá las humillaciones.
beneficencia, destierra el odio, la malignidad y los 2.º La avaricia o el apego á las riquezas; nos manda
celos. la limosna y el desinterés sin aprobar la prodigali
99. No sin justicia se coloca inmediatamente des dad. 3." La lujuria ó el deleite carnal y sus conse
pues de las virtudes teologales la religion; esta con cuencias, de las que ya hemos hablado..." La glo
tiene la piedad ó la devocion; por una parte condena tonería ógula y todo lo que se opone á la templanza,
toda especie de impiedad, como la blasfemia, los ju— sin exigirnos las austeridades ó mortificaciones esce
ramentos, los libros escritos contra la religion, la sivas. 5.º. La envidia y los celos, pasiones muy dife
irreverencia respecto de las cosas santas, su profana rentes de la emulacion. 6." La cólera, la venganza,
cion, el perjurio, el sacrilegio, la irreligion, la simo— las disputas y pleitos; nos ordena la dulzura y aun
nía, y por otra reprueba la hipocresía, la supersticion la obediencia para con los superiores díscolos. 7.” La
y todas sus prácticas como las ordalias ó pruebas su pereza y la ociosidad, prescribiéndonos el trabajo, y
persticiosas, el pan conjurado, las pretendidas cien— enseñándonos á santificarle.
cias secretas, el arte de los espíritus, las artes de San102. A todos estos preceptos sabios el Evangelio
Pablo, las suertes de los santos, la hechicería y la añade los consejos de perfeccion que se llaman las
magia, la adivinacion, la idolatría, el uso de los ido ocho bien-aventuranzas, y nos exhorta á las buenas
lotitas ó carnes inmoladas, etc. Pero la religion no obras de subpererogacion.
prohibe toda clase de juramentos. 103. Por eso la Iglesia ha condenado con tanta
100. En todas épocas los moralistas han distin severidad á los corruptores de la moral como á los
guido cuatro virtudes principales ó cardinales: la pru que alteran el dogma. Por una parte proscribe los
dencia, la justicia, la fortaleza y la templanza; pero falsos rigoristas, como los novacianos, los montanis
nunca han desarrollado sus deberes tan bien como el tas, llamados frigianos, catarigas, pepusianos, quin
Evangelio. Por la prudencia, comprendian principal tilianos, pasalorinquitas, familistas, mayoristas, ma
mente la sagacidad para conocer nuestros verdaderos salienses, sacóforos y los eunucos ó valesianos que se
intereses en este mundo; por el contrario, por esta mutilaban, etc. Por otra á los entusiastas y falsos es—
virtud se entiende en el Evangelio la precaucion para pirituales, como los cuáqueros ó profetas, los quietis
evitar lo que puede poner en peligro nuestra salud ó ias, lurignonistas, bohmistas, euquitas, hernutas,
la de los demas, sin escluir la sencillez cristiana. hermanos blancos, joaquimistas, lábadistas, melo
La justicia evangélica proscribe todo lo que pueda distas, pietistas, los hesicastas y fautores de la inac—
herir al prójimo ú ocasionarle perjuicio, ya en su cion; no aprueba indiferentemente los ilapsos ó está—
persona, como el asesinato ú homicidio, bajo el cual ticos, las pretendidas transformaciones, las ligaduras,
se comprenden el parricidio, el infanticidio y toda etc. Ha escluido de su seno las sectas licenciosas, á
clase de violencias; ya en sus bienes, como el robo, los que se han comprendido bajo el nombre de ada
el fraude, la prodigalidad y la usura; ya en su honor mitas, amsdorfianos, antimoníanos, begardos y be
como la calumnia, la murmuracion, los ultrajes y el quinos, borboritas, carpoccraianos, ó harpocracianos,
desprecio; ya en su amor respecto de la verdad, que condormientes, davídicos, docetas, dulcinistas, etico
le hace detestar la impostura, la mentira y aun los roscoptas, florinianos, gnósticos, helicitas, hombres
fraudes piadosos y la lisonja; y por el contrario le ¿ inteligencia, hutitas, iluminados, incestuosos, la
exige el candor y la sinceridad; ya en sus virtudes titudinarios, libres, libertinos, mamilares, marcitas,
por el escándalo; por consiguiente la justicia exige las molinosistas, nicolaitas, untados, opinionistas, pa
restituciones ó reparaciones cuando se halla ofendido ternianos, retorianos, segalerianos, siniestros y tur
el derecho de otro. Bajo el nombre de fortaleza orde lupinos. Ha reprimido las opiniones de los probabilis
na el Evangelio no solo la paciencia en los trabajos tas y de los casuistas relajados.
y la perseverancia en el bien, sino el amor á los pa— 10. Los enemigos del cristianismo le acusan
ecimientos; no es cierto que nos mande la apatia de injustamente de alimentar el fanalismo, relajar los
los estóicos, que no condene el suicidio, ni que nos lazos de la sociedad, de no exigir la amistad, prohi
prohiba la defensa de nosotros mismos. La templanza bir la profesion de las armas, las funciones civiles y
cristiana no se limila á condenar la glotonería y pres el comercio; de deprimir las ciencias y las artes co
cribir la sobriedad, sino que se estiende á recomen mo ocupaciones mundanas; y haber perjudicado á
dar la abstinencia y el ayuno; no solo prohibe los los progresos de las letras. Ninguna otra religion
 XXXVIII
inspira tanto celo para establecer escuelas, y princi Por lo que respecta al culto de la cruz y del cruci
palmente escuelas de caridad. Otros tambien con fijo, y á las fiestas de la invencion y exaltacion de la
muy poca razon la reprochan el autorizar el abuso santa cruz, es evidente que todas se refieren al mismo
del poder político, aprobar la guerra, etc., y á los Jesucristo, y que nada tienen de comun con la perti
predicadores el haber desterrado del púlpito la moral nacia de los staurolatras ó cacinzarienos.
natural, humana y social. 110. El culto esterior comprende la oracion, ya
Culto religioso del cristianismo. ¿ ya pública. A esta última se la denomina
iturgia, servicio ú oficio divino. En las diferentes
105. El culto religioso consiste principalmente partes, de la Iglesia se celebra segun los diferentes
en los sentimientos interiores de adoracion, de amor ritos; asi, se llama rito griego, latino, romano, ga
y de reconocimiento para con Dios; se conservan por licano, mozárabe, colo ó cótico, armenio y malabar.
medio de la meditacion llamada oracion mental ó A él va unido generalmente el canlo ya ambrosiano,
contemplacion y por las oraciones jaculatorias; el y a gregoriano; pero nunca ha sido preciso celebrarle
hábito de ejercitarse en ellas se denomina vida inte— en la lengua vulgar; se llaman rúbrica los ritos que
rior, y á veces se comprenden bajo el nombre de es necesario observar en él.
frontistas ó meditativos á los que tienen este hábito, 111. En la Iglesia católica, la parte principal del
y beatos por un desprecio injusto. Pero el culto inte— servicio divino es el santo sacrificio de la misa, de
rior, tiene necesidad de ser escitado por el esterior, nominada en otro tiempo sinaxis. Se distinguen en
por los ritos ó ceremonias, y la pompa de este culto no ella, el introito, los kiries, el cántico de los ángeles
es censurable. ó gloria, las coleclas, la epístola, el gradual, la ale
106. Segun los diversos objetos á que se dirije el luya, el tracto, la secuencia, el evangelio, el sím
culto, se distingue en culto de latria, en culto supre— bolo de Nicea, el ofertorio, las secretas, el prefacio,
mo rendido á Dios solo, ó á Jesucristo Dios; en cul denominado á veces ilacion, el trisagio, el cánon, la
to de dulia á los santos, y la hiperdulia ó mas pro consagracion, los mementos, la oracion dominical, el
fundo, rendido á la Vírgen Maria, madre de Dios. agnus Dei, la comunion, el post communio, la bendi
107. Un punto de creencia de la Iglesia católica es cion del sacerdote, y la voz amen que se responde al
que sea permitido y laudable el honrar á los santos, fin de las oraciones.
invocarlos, y contar con su intercesion, rendir culto 112. Lo restante del oficio divino, bien sea de dia
á sus imágenes y reliquias sacadas de las catacum ó de noche, se divide en siete horas canónicas, que
bas ó de otra parte, á sus cuerpos incorruptos, etc. son maitines, laudes, prima, tercia, sesta, nona,
Condenó en otro tiempo á los iconoclastas é iconó— vísperas y complelas, que los griegos llaman apodi
macos, que llamaban á los católicos iconólatras; ha pula. Los laudes se reputan como una parte de los
alabado el celo de los abrahamitas, monges que naitines ó tinieblas; y generalmente se dividen en
murieron por este culto, y contra el cual no se puede tres nocturnos. Comprenden el invitatorio, los him
sacar ninguna, consecuencia de los libros carolinos. nos, las antífonas, los salmos, el gloria Patri, los
Las actas de los santos fueron redactadas por los versículos, las bendiciones, las lecciones, los res
bolandistas, con mas sabiduria que lo habian hecho ponsorios, las súplicas, el Te-Deum, las capítulas,
los antiguos legendarios; pero no estamos obligados los cánticos, las oraciones, las conmemoraciones,
á creer todo lo que se ha referido en las leyendas, lo los sufragios y las letanías.
que se ha dicho de Acaya en las actas de S. Andres, 113. En estos diversos oficios, las personas que
la Verónica, etc. Las bulas de beatificacion y Canoni asisten á las ceremonias reciben diferentes nombres;
zacion de los santos no tienen nada de reprensible. hay celebrante ú oficiante, asistente, diácono, sub
108. Con mucha mas justicia debemos honrar á la diácono, los sacerdotes revestidos, acélitos, cerofera
santa Vírgen por respeto á Jesucristo mismo; al lla rios ó porta-cirios, turiferarios, coristas, crucero y
marla Nuestra Señora, , no pretendemos igualarla á los niños de coro. Entre los griegos hay un prota
Nuestro Señor. La Iglesia ha condenado con razon á ostolario, un lampadario, los hidromitas, un para
los antidico-marianitas ó helvidianos, enemigos de onista, etc. Tambien tienen nombres particulares para
este culto; á los nestorianos, que rehusaban á Ma— designar muchas partes del oficio, como apolítico,
ría el título de madre de Dios, á los discípulos de himno querúbico, hirmas, idiomeles, macarismo,
Joviniano, que ponian en duda su virginidad perpé meneas, triordion, tetraodion, tropano ó tropario,
tua; y lampoco ha aprobado la supersticion de los triadico, etc.
coliridianos. Por consiguiente celebra la concepcion 11. Las oraciones, los oficios, el canto y las rú
inmaculada de María, asi como los griegos que la bricas estan contenidos en diferentes libros que se
llaman panacrante, su natividad, su presentacion, llaman antionario, breve, directorio u ordo; brevia
su visitacion, sus dolores, su asuncion, á pesar de rio, ceremonial, diurnal, encologio ú horas, epistola
lo que se ha dicho de su sepulcro y la fiesta de su rio, evangelio ó testo, gradual, misal, pontifical, pro
santo nombre: aplaude la devocion de los fieles que cesional, racional, ritual y sacramentario. Los grie—
recitan la salutacion angélica ó el Ave-Maria, la co gos lienen otros llamados anthologo, horologion,
rona, el rosario, la salve, elc. menologio, paracléctico, synaxarion y típico.
109. No deben criticarse tampoco las cofradias ó 115, Entre las diferentes ceremonias unas son co
Congregaciones erigidas en honor de la santa Vírgen munes y otras raras: las bendiciones del agua, del
0 de los santos, como la del consorcio en Milan, la fuego, da pan, del cirio pascual, de los agnus Dei,
del escapulario, la del cordon de S. Francisco, la de las mugeres despues del parto, de las banderas
llesla de sus llagas, las novenas y las peregrinaciones. militares, de las campanas, de los alimentos ó eulo
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ios, las oblaciones, oblata ú ofrendas, los colibios fuerza coactiva, que la Iglesia tiene el derecho de
¿ los Griegos, las gennflexiones, las prosternaciones, imponer penas espirituales, censuras, la escomunion,
las procesiones, los exorcismos, adjuraciones ó con la suspension, el interdicto, el declarará ciertas per—
juraciones, la cena ó el lavatorio de pies, la consa— sonas irregulares; que la gerarquía, la distincion en
gracion de las iglesias y de los allares, el aifabeto, tre los eclesiásticos ó la clerecia, y los laicos, etc. es
la sacra de los reyes y de los obispos, la ceremonia de de derecho divino. No por esto se ha de creer lo que
las partículas entre los griegos, etc. los griegos publican de sus broncolacas, ntoupió éx
116. Los lugares consagrados al culto divino son comunicados.
los templos, iglesias ó basílicas, de las cuales unas son La irrupcion de los bárbaros en el occidente y otros
catedrales ó metropolitanas, otras colegiatas, par o — acontecimientos han introducido algunos cambios en
quiales, ayudas de parroquia ó anejos, ¿ 0 Td — la disciplina, y han dado lugar á abusos, como el
torios y cementerios; en otro tiempo se llamaban ti— rescate de los altares, etc.
tulares las iglesias parroquiales. 122. En todas épocas ha condenado la Iglesia los
"En las iglesias hay el santuario, los altares, independientes, los que se oponen á sus leyes como los
el púlpito ó la protesis de los griegos, el trono de levíticos, rama de los nicolaitas, los aeriaños, los ago
Obíspo, la nave, la tribuna ópulpitillo, el púlpito de niclitas, los nictagios, los erastianos, los consohalditas,
y otros llamados petrobrusianos, henriquistas, corna
predicador, el baptisterio ó las fuentes bautismales, los
confesonarios, los nichos, y el vestuario ó sacristía. ristas, valdenses, picardianos, ensabatos, runcarios,
118. Entre los varios instrumentos ó muebles que atarinos, wiclefitas, husitas, taboritas y orebitas,
sirven para el culto divino, hay vasos sagrados, co ermanos bohemios, pastoricidas, protestantes, ca
mo caliz, disco ó patena, copon; otros que no lo son, meronianos, broronistas, anglicanos, presbiterianos,
como viriles y vinageras; los lienzos sagrados, lla puritanos, laicocéfalos, etc. La disciplina que eslable.
mados corporales, ¿ manteles de altar cieron entre ellos, sus sinodos, sus teólogos, ministros,
denominados sabanillas y frontales, las palias, el pa superintendentes, etc. no interesan mucho á un teólo
ño de comunion que tambien se llama dominícal, los go católico.
tabernáculos, candeleros, gradas, atril, palios ó cor 123. Jesucristo mismo estableció pastores para
tinillas, navetas, pendones, urnas ó cajas, estandar— obernar su Iglesia. A su cabeza está el Papa ó so
te, los relicarios, los rosarios ó paternoster, las cam ¿ pontífice, vicario de Jesucristo en la tierra,
panas á las que han suplido los griegos por los ha— que tiene por derecho divino, no solo la primacia, fi—
giosideres y el simadiri. gurada por las llaves del reino de los cielos, sino una
119. Se distinguen los dias consagrados con es— autoridad de jurisdiccion sobre todo el cuerpo de la
pecialidad al servicio de Dios que son los domingos Iglesia y sus miembros, autoridad arreglada por los
y fiestas de los feriados: entre las fiestas, unas son cánones, y que no se estiende á la parte temporal de
movibles, y otras son fijas ó no movibles; todas están los reyes. La silla de San Pedro, que ocupa, se deno—
marcadas en el calendario. Con relacion al grado de mina con justicia la santa Silla, la Silla apostólica,
solemnidad, unas se llaman anuales, y otras solem — y su sucesion no puede ponerse en duda. La tiara de
nes; los oficios son dobles, semi-dobles, simples, las que algunos autores han hecho un crímen es un sím
vísperas ó vigilias, y las octavas; se marca siempre bolo muy indiferente; sus rescriptos ó decretos se lla—
su concurrencia ú ocurrencia. man bulas, brebes apostólicos, constituciones; ha es
120. De las fiestas de los misterios de que hemos tablecido congregaciones y consultores para servirse
hablado ya, las mas solemnes son las Pascuas, la de sus luces.
Ascension, Penlecoslés, Corpus, las encenias ó dedi Han acusado á algunos papas muy injustamente: á
cacion de las iglesias, la fiesta del patrono, y Todos Liberio de haber firmado el arrianismo, á S. Grego
Santos, Los domingos de adviento, de la septuagé rio el haber hecho quemar sus libros, y á Zacarias el
sima, llamada por los griegos apocrea y azote, de haber condenado ¿ que sostenian la existencia de
sexagésima, de quincuagésima, los de cuaresma ó los antípodas. Los protestantes publicaron fábulas
cuadragésima, de pasion, de ramos, de cuasimodo, acerca de una pretendida papisa Juana y la silla agu
se marcan con especialidad, asi como el miércoles gereada, que á ninguno se las han hecho creer: han
de ceniza, la semana santa, el jueves santo ó de ab— existido muchos antipapas.
solucion, porque se dá en él la absolucion general, las 12. El episcopado y los obispos son de institucion
cuatro témporas y las rogativas. En otro tiempo du— divina, su jurisdiccion no se estiende mas allá de su
rante la época cuadragesimal se observaba la xeropha diócesis, pero sus mandalos obligan á sus diocesanos.
¿ La Iglesia ha suprimido con razon las indecencias Los privilegios y la preeminencia de ciertas sillas, la
e la fiesla de los locos, del asno, etc. distincion de los patriarcas, de los primados, de los
Disciplina del cristianismano. arzobispos ó metropolitanos, de los prototronos, de
los autocéfalos, de los gobernadores y obispos auxi
121. Para conservar el dogma, la moral y el cul liares, de los obispos in partibus, de los intercesores,
to del cristianismo sin alteracion, han sido necesa de los metrocomias, elc, son de pura disciplina, y per
rias leyes disciplinares, la coleccion de estas leyes tenecen mas al derecho canónico que á la teología. Lo
es el derecho eclesiástico ó canónico, pero depende mismo acontece con las prelacías, los prelados regio—
en muchas cosas de la teología. A los teólogos cor— narios, los periodentas, los sincelles y proto-since
responde probar que la Iglesia ha recibido de Je lles, los defensores, los arciprestes, etc.
sucristo el poder de dar decretos que obliguen á 125. Ademas de los obispos han sido necesarios
los fieles en conciencia, sin que tengan por esto, la pastores de segundo orden, que fueron llamados al
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principio ancianos, y despuespapas por los griegos, cu agustinos, coloritas, clementinos, los de fassoli y los
ras ó rectores de parroquia, vicarios, vice-vicarios hermitaños de S. Agustin ó padres—menores, los po—
y tenientes, y clérigos para ayudarles en sus funciones. bres católicos, pobres voluntarios.
126. Pero el deseo de aumentar la pompa del Los cartujos, los camaldulenses, los Inínimos ú
culto divino ha hecho que se aumente el número de hombres buenos, los carmelitas calzados ó descalzos,
sacerdotes, establecer cabildos y canónigos en las calos celestinos, y los guillelmitas, fueron fundados por
tedrales y colegiatas. Para mantener el órden, hay las mismas razones. -

entre ellos dignatarios con los nombres de dean, pre En Francia se conocen mejor que en otra parte los
boste, capiscol, chanlre, calor, primer chantre, sub servitas, diferentes de los hábilos blancos, los yeroni
chantre, arcediano, cancilier, escolástico ó maestro milas, los humillados, los mendicantes, los olivela—
de escuela, tesorero, el c.; y diversos oficios, corno nos, los religiosos del cuerpo de Cristo, los cruceros ó
procurador, canarero, racionero, cestero, cirilero, porta-cruces y los gilbertinos de Inglaterra.
porcionero, puntero, paestro de ceremonias, magis 131. El mismo origen tienen las congregaciones
iral, sacristan, entre los griegos, sceceo y lacta, stau de canónigos regulares, los victorinos, los genovea
rofilaris, laosinacta, herenaca, etc. Relativamente al nos, los de Val-des-ecoliers, de S. Juan de Letran,
servicio divino, hay un hebdomadario y un diácono del monte Corbulo, de S. Colombo, de S. Jorge de
estacionario. Alga, de S. Salvador, los premostralenses, etc.
En todas las iglesias han sido necesarios individuos 132. Otros se han consagrado á obras de caridad,
dedicados con especialidad á ciertas funciones, como como los religiosos pontífices, los trinitarios ó matu—
cantor, lector, acólito, fosario, organisla, campanero, rinos, los religiosos de la merced ó de la redencion
ele.; pero estos usos no pe"tenecen tanto á la teología. de cautivos; ó son hospitalarios, como los hermanos
127. Conviene que en las finciones del culto di de la caridad, los celitas, los pobres de la madre de
vino, los ministros de la lglesia lengan vestidos ó há
Dios, los clérigos regulares que asisten á los enfermos,
bilos sagrados de diferentes formas y colores: para los canónigos regulares de S. Antonio de Venecia, los
los sacerdotes hay solana, sobrepelli, anito, aiba, bellemilas.
manípulo, orariun ó estola, asula, capa pluvial, bo— 133. Muchos para ayudar á la clerecla secular,
nete; para los diáconos la túnica ó dalmática; para se han dedicado á la instruccion del pueblo ó de los
los canónigos capa de coro y mucela. Los ornamen niños, como los apostolinos, barnabitas, los berthe
los pontificales de los obispos son el roquete, la mu— lemitas, los clérigos menores, los doctrinarios, los
cela, la cruz, la mitra, la capa y el báculo. la ha— dominicos, hermanos predicadores ó jacobinos, los
bido sus razones para mandar á los eclesiásticos que etidistas, la congregacion de S. Juan, los jesuates,
lleven vestidos talares, como la solana. los jesuitas, los canónigos de S. Marcos, los de nues
128. Es mas conveniente todavia el que estén tro Salvador, los del oratorio, los silvestrinos, los so
obligados al celibalo, á la continencia y á la residen mascos, los teatinos, los misioneros llamados lazaris
cia, y que no haya entre ellos ninguna persona estra las, los clérigos regulares de las escuelas pías, los ig
ña; es justo que se sostengan por medio de los benefi morantinos, hermanos de las escuelas cristianas, ó
cios ó bienes eclesiásticos, que tengan un tempora i— de S. Yon., que no son religiosos sino legos.
jo ó derechos provech sos y honorarios, observando 13. El gobierno de estas órdenes o congrega
los cánones que prohiben la pluralidad de beneficios. ciones ha dado lugar á los nombres de archimandrita,
129.. Un teólogo está en el dia obligado á juslii hegúneno, abad, abadía, general, asistente, pro—
car las leyes eclesiásticas que atañen al monaquis viticial, guardian, procurador, her nano lego ó do
mo ó estado monástico los votos de religion y la pro nado, novicio, particular, peregrinario, discreto,
fesion religiosa, los monjes mendicatles ó de renas, discretorio, prior, sub-prior, cillerero, celda, lec—
los monasterios ó conventos, los claustros y la cau— tor, in pace, maestro ¿ novicios, prueba, toma de
sura, las reglas, las observancias, los usos de los re— hábito, noviciado, profesion.
gulares, de las comunidades de ambos sexos. Tienen Entre los hábitos religiosos se distinguen, la capu
que sostener contra los lampeitaos y sus copistas cha, la cogulla, el escapulario, la capilla, el breve,
que las órdenes religiosas son útiles, que sus instiu balandran ó capa y los pañeles. Se han suprimido con
tores y fundadores tuvieron miras ladables; sin apro. justicia las oblaciones.
bar los hermanilos, los girovagos, renobotas ó sa 135. Del mismo modo, entre las religiosas ó
aba: las. -
monjas, las mas están consagradas á la oracion, al
130. Los unos, en tiempos de revolucion y de trabajo y á la mortificacion, como las anunciatas, las
relajacion de las costumbres, han querido servirá Dios benedictinas, las bernardinas, las brigilinas ó hijas
en paz y en seguridad, como los anaco relas, hermi de S. Salvador, las del Calvario, ó de Sla. Clara, del
laños, stilitas, a cetas, acemelas, y los con bilas, los Ave Maria, las Claras, las carmelitas, las cartujas,
monjes de San Basilio, llama los caloyeros Tales las Franciscas, las dominicas, las fuldenses, las reli
son tambien entre nosotros los enedictinos de C uny giosas de Fontev rault, las comendadoras, las descal
y otros, y sus reormas de Val des-Chouy y de Va zas, las oblatas, las solitarias, las terceras y las visi
ileumbroso, los Bernardos de Cister, los fuldenses y landinas.
los de la Trapa; los franciscanos distinguidos en ca 136. Otras se han dedicado á obras de caridad
yuchinos, cordeleros ó hermanos menores conventua y á la instruccion de las niñas; tales son las religio—
es v observantes, recoletos, coleclantes, terceros ó sas de la congregacion, las hijas de la cruz, de la in—
uercera orden de penitentes de Picpus, "iferentes de facia, de la presenlacion, de la union cristiana, las
la órden tercera de seglares llamados terceros, los nuevas católicas, las jesuilesas, las teainas, las ur
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sulinas; á la correccion y conversion de las personas sarios, las vigilias, ofrendas á Dios por los difuntos,
relajadas, como las religiosas de la Magdalena, las de las exequias, funerales ó pompas fúnebres modestas,
nuestra Señora, de la caridad y las del refugio; al el respeto por las sepulturas y sepulcros, como actos
cuidado de los enfermos, estas son las hospitalarias de caridad y no de vanidad, como una profesion de fe
de cualquiera especie que sean, las hermanas de la de la inmortalidad; ha condenado á los eternales que
caridad ó hermanas grises, las cretenistas , las de sostenian que este mundo seria eterno.
S. Dimas, las hijas de santo Tomás de Villanueva, 12. censurado del mismo medo á
los bogar—
etc.; para educar los espósitos y los huérfanos, como milas ó bogomilas, los procliniatas, los saturnianos,
las religiosas del Espíritu Santo y otrasllamadas huér y los semblianos que niegan la resurreccion general y
fanas, etc. el juicio último, y daban á los ortodoxos el nombre
137. Ha sido necesario como entre los religiosos, de pilosistas; no ha probado los quiliastas ó mile
que haya superioras, abadesas, prioras, etc. pruebas narios, que suponian un reino temporal de Jesu-Cris
y un noviciado, hábitos particulares, el velo, venda, to por espacio de mil años, ni á los hutitas que decian
griñon, la toca ó manto de las herinanas negras, etc. que estaba próximo el juicio final. No está revelado
Las jóvenes y mugeres que se llaman beatas, y su con toda claridad el último advenimiento de Jesu
mansion beaterio, no son religiosas. Cristo, el fin del mundo, la venida del antecristo y
138. La santidad del cristianismo en sus dogmas, de Elias, la conversion de los judios, etc.; las conge
en su moral, en su culto y en su disciplina, ha sido turas de los antiguos y modernos acerca de este pun
demostrada por el cambio que ha producido en todos lo no tienen fundamento, lo mismo que lo que se ha
los climas, en el norte y en el mediodia, en las cos dicho del valle Josafat. o SS" Supónese que habla
tumbres de los asiáticos, de los africanos, de los in Bergier de la circunstancia de los sucesos, que dice no
gleses, y en el dia en la de los abisinios, por la dife estar revelados con toda claridad. Asi se deja cono
rencia que establece entre las naciones cristianas y cer, puesto que trata de refutar, á los milenarios, y
las infieles, infectadas con el paganismo, el mahome á quienes hablaban de la proximidad del juicio final.
lismo y los sueños del Alcoran, por la multitud de Lo cual equivale á si dijera : No está señalado el pla
establecimientos de caridad que existen, entre nos zo; no es fija la fecha; no está determinado el dia, ni
otros, tales como los hospitales ó casas-de-Dios, los la hora; no están fundadas en la revelacion las con
montes pios, las escuelas pias ó de caridad, la hos jeturas, que acerca de estas circunstancias hicieron
pitalidad, etc. Demasiado acostumbrados á los benefi los antiguos y modernos; y de las mismas circunstan—
cios de nues ra religion, no conocemos sus ventajas. cias habla respecto del valle de Josafat. Ni podia ser
Aun en los siglos mas bárbaros se conocian los pacia de otra manera la mente del autor, cuando en el ar—
rios; la paz ó la tregua de Dios. tículo Juicio final se esplica acerca de la resurreccion
139. Los incrédulos de nuestros dias han decla y juicio veneridero en los términos, que debe hacerlo
mado injustamente y con la mayor amargura contra todo católico; y por cierto que la justicia y la sana
los abusos en hechos de religion, contra las cruzadas, crítica autorizan esta esplicacion. El abate Bergier
el derecho de asilo, las cuestiones, la intolerancia, el era católico, sabia, y recitaba el credo, como sacer
fanatismo, el castigo de los sacrílegos, la revocacion dole, al menos dos veces todos los dias; y aunque al fi
del edicto de Nantes, las pretendidas guerras de re nal de dicho artículo reputa como opinion popular
ligion , las vísperas cicilianas, y preconizado la li el sentir de que el juicio final será en el valie de Josa
bertad de pensar, ó mas bien de escribir y calumniar. fat, no por esto debe hacérsele el cargo terrible de
140. Han llevado su prevencion hasta censurar negar un juicio que supone él mismo. Por lo demás,
las fundaciones piadosas, la libertad de los esclavos, nada tiene de vulgar dicha opinion ; por el contrario,
el celo de los misioneros y de la propaganda, las basta lo que dice el profeta Joel acerca de esto para
misiones de Paraguay, de la China y del Japon ; la creerlo fundado.
han atribuido la matanza de los americanos y las des 13. La Escritura usa de las voces beatitud ó el
gracias de la América, la línea de demarcacion, etc. estado de la bien-aventuranza, paraiso, cielo, empí
VI. -
reo, reino de los cielos, seno de Abraham , la gloria
eterna, la vision intuitiva de Dios, el estado de com
Dios, últimao fln de todas las cosas. prension; se ha decidido contra los griegos cismáti
11. La Iglesia de Jesu-Cristo, militante sobre la cos y los augustinianos sacramenlarios, que la bien
tierra, tiene su esperanza en un estado mas feliz el aventuranza de los justos y el suplicio de los conde
hombre viajero tiende al cielo como hácia su patria, nados no se difiere hasta el juicio último. Por lo que
llama á esto el último fin, la muerte, el juicio de respecta á las visiones de los coceyanos, no merecen
Dios, el paraiso, el infierno, y eulhanasia á la muer la menor atencion.
te de los justos. No creemos que la muerte rompa los 1 %. El infierno, la gehenna, el fuego eterno y
lazos de la caridad cristiana, ni la comunion de los la condenacion estan reservados, para los malos y
santos, ó la participacion mútua de las buenas obras. los réprobos; se ha anatematizado á los origenistas
Creemos que los bien-aventurados pueden interceder que niegan la eternidad de las penas, y á los me—
por nosotros, y que debemos orar por los muertos tempsicosistas partidarios de la transmigracion de las
que padecen en la otra vida. La Iglesia ha decidido almas, y á los sectarios de Ahaury que niegan el in
que existe un purgatorio ó un fuego purificador des fierno; pero la sana teologia no admitirá jamás una
pues de la muerte, pero no que haya limbos; por con reprobacion absoluta.
siguiente aprueba las oraciones, las ofrendas, las 13. En el Apocalipsis, Jesu-Cristo es llamado el
buenas obras, las misas, las treintenas, los aniver alfa y c mcga principio y n de todas las cosas.
Tnio I.
 All TEMI I MT),
«eae se esa euae antra ean la edic lon ele París del año de 17ss.
--EG-2. X3xC-35

#s S. rº 1 se ha retardado la publicacion de la parte teológica de la Enci

º, clopedia, esperamos el público nos disimulará esta tardanza,
-

Y s despues que conozca las dificultades que hemos tenido que vencer
º y el trabajo inmenso con que nos hemos visto abrumados.
De los dos mil y quinientos artículos de que se compone próxi
S º mamente esta obra, una cuarta parte por lo menos, faltaba en la an
tigua Enciclopedia, ó no habian sido redaclados sino como artícu—
los de gramática; por consiguiente ha sido preciso hacerlos. Un número casi igual con
tenia una doctrina falsa ó sospechosa; habian sido copiados de los escritores heterodoxos,
ó hechos por literatos, que por sus principios favorecian la incredulidad, haciéndose ne—
cesario el corregirlos. Muchos contenian discusiones inútiles, y los hemos abreviado. Otros
eran incompletos, y les hemos añadido lo que nos ha parecido conveniente. Algunos se han
suprimido por supérfluos No hemos visto, por ejemplo, la necesidad de hacer veinte artícu—
los del arrianismo, porque los partidarios de esta heregia han tomado otros tantos nombres
diferentes; el distinguir homoousios y consubstancial, que uno es traduccion del otro; el ha
blar del domingo de las Palmas y del de Ramos; el cambiar una letra para poner corban y hor—
2 se ban: chirotenia y keirotenia en lugar de la imposicion de las manos; purim y furim que signifi
- can hados y el poner voces griegas ó hebreas en lugar de sus correspondientes en francés. Asi es,
S- ) quede cualquier manera que sea, nuestro trabajo es casi enteramente nuevo. - A- a

De tres partes que abraza, á saber: la teologia dogmática, la crítica sagrada, y la historia eclesiástica,
la primera es la que exigº º atencion, y la que presenta mas dificultades. Como todas las demas cien
asene su lenguaje particular, ciertas voces consagradas para espresar los misterios, de las cuales no
(ºs posible separarse, sin esponerse á caer en el error. Nosº debe por lo tanto pretender de un teólogo que
emplee otros términos mas claros y que pertenezcan al lenguaje vulgar ni que demuestre evidentemente
verdades que Dios ha revelado para que se crean bajo su palabra , aunque no podamos concebirlas,
Después de mil y ochocientos años próximamente que hace que se formó la teologia cristiana, no ha pa
sad¿solo siglo sin que se vea atacada por alguna secta de incrédulos; esta ciencia pues se hizo muy con
tenciosa. Como su objeto es saber, no solo lo que Dios ha revelado sino del modo con que ha sido atacada
y defendida su doctrina, apenas existe un solo artículo sobre el cual no se pueda disputar; un teólogo es
cribe siempre rodeado de una multitud de enemigos, y por desgracia nunca fueron tan numerosos como en
el siglo actual. No debe pues causar admiracion si contínuamente estamos en pugna con los socinianos y
protestantes, que han renovado la mayor parte de los antiguos errores, y con los deistas é incrédulos que
copiaron á todos. Nuestros maesºs º teologia son los Padres de la Iglesia; nos creemos por lo lanto obli—
gados á seguir su ejemplo. Aquellos autores respetables escribieron, cada uno en su época, contra los erro
res quemas ruido hacian ¿y ¿ contra los que se habian olvidado casi por completo; no debe cau
Sar ¿ ¿ ¿ quedeacusemos á los protestantes de haber querido á propio intento favorecer á los
- emOS imilarleS.

enemigos del cristianismo; pero tampºººººººººº cierto que sin quererlo, les han suministrado casi todas
¿s es una circunstancia que no hemos podido menos de hacer notar muchas veces, porque nada es
¿ente si los protestantes no llevan á bien el verse asociados contínuamente en nuestra obra á los in
¿o nos eclien la culpa, sino á sus doctores. Entre los luteranos, Mosheim y Brucker; entre los
¿stas Beausobre, Basnage, le Clerc, Barbeyrac entre los anglicanos chillingwöorth y Bingham son
¿s de donde hemos sacado lo que decimos de ellos, porque son los últimos que han escrito, y los
que tienen mas repulacion. Han tratado de presentar las antiguas ºbicion bajo otro aspecto: han tenido
¿rte de desigurar la mayor parte de la historia eclesiástica; apenas hay Padre de la Iglesia, contra el
¿no hayan formulado sus acusaciones; han impuesto una nueva carga,á los teólogos católicos, que nues
tros mejores controversislas no han podido sobrellevar; viéndonos obligados á encargarnos de ella, y si no
hemos cumplido como el asunto requeriaº al menos creemos que queda hecho lo mas esencial. Al dar una
¿notica de las obras de los Padres, hemos tratado de hacer su apologia.
 X.l

Lo mismo acontece con los personages del antiguo estamento, cuyas virtudes se ven ensalzadas en la his
loria santa, y que los incrédulos, siguiendo los pasos de los maniqüeos, han tratado de presentar bajo los
colores mas feos. Pero en lugar de aumentar los artículos de crítica sagrada, hemos suprimido un gran nú—
unero de ellos. Nos ha parecido inútil el disertar sobre espresiones que todo el mundo conoce, ó sobre térmi
nos que nada tienen de particular, y copiar el Diccionario de la Biblia. De mas utilidad es sin duda alguna,
el ilustrar los pasages de que han abusado los hereges ó los incredulos, ó que son un motivo de controver
sia entre los teólogos.
Debe tenerse presente que un Diccionario teológico, por exacto que sea, nunca podrá suplirá un curso de
teologia completo, en el que se reunen sobre cada cuestion todas las pruebas y respuestas de las objeciones,
y en el que se hace ver la trabazon que nuestros dogmas tienen entre sí, de modo que el uno ilustra, y con—
rma el que viene despues (1). Seria un error el creer que, por medio de un Diccionario tan abreviado, se
pueda llegará ser un gran teólogo. Si el presente se hubiera publicado solo, hubiera sido necesario hacero
mas estenso y haber intercalado muchos artículos de metafísica, moral, historia, disciplina y jurispruden-.
cia canónica, que se encontrarán en su verdadero lugar.
Tampoco nos hubiera sido muy dificil, el cargarle de citas; pero baste advertir en general, que para la
Crítica sagrada, hemos sacado los principales materiales de los Prolegomenos, de la Polyglota de Inglaterra
de la Filosofia sagrada de Glassius, de las Disertaciones y prefacios de la Biblia de Avignon, en 17 volúme
nes en 4.º. Para la Historia eclesiástica, de Fleury, Cave, Dupin, Tillemont y Cellier. No hemos dudado en
copiar muchas observaciones de los protestantes de que acabamos de hablar, y principalmente de Mosheim,
cuando nos han parecido verdaderas y dignas de la atencion del lector. Por lo que respecta á la teologia
dogmática, aunque hubieramos encabezado cada artículo con los nombres de Petau, Tournely, Wittasse,
Lherminier, Juenin, ú otros autores mas modernos, el lector no habria aprendido mas: estas obras son cono
cidas de todos los teólogos, y las demas personas nunca se acuerdan de leerlas.
No tenemos la vanidad de creer que este Diccionario salga enteramente esento de defectos. un solo hom
bre, por laborioso que sea, no puede bastar para esta empresa. Los que vengan despues podrán hacerlo mejor;
es mas fácil ver los defectos de una obra ya hecha, que el evitarlos al componerla.
(1) Un diccionario teologico tiene otras ventajas que no presenta un tratado completo: es de un uso mas general; se le consulta
eon mas comodidad y mas gusto, y contiene ademas un gran numero de articulos de que no es sus ceptible un eurso de teologia.
 DRQ NONRARIO

EBE (NEB ta) º téAv.

A
de las víctimas no podia compensar los inconvenientes
33 ge ar o n, estaban espuestos, tanto los sacerdotes en gene
á
¿es gg hermano de ral como su gee. No vemos en la historia Sagrada que
AS -¿a Moisés, pri los pontífices de los hebreos hayan jamás tenido una
era y
ºverse
mer pontí gran autoridad ni una fortuna considerable, y no ati
de la namos qué motivo hubiera podido escitar la ambicion
cº zº
º 3 religion ju
dáica.b. de gobernará un pueblo tan intratable y revoltoso co
mo el pueblo hebreo.
#e de verse su historia en Exodo Añaden los mismos críticos, que el pueblo fue cas
e» y libros subsiguientes; no nos to tigado despues de la adoracion del Becerro de Oro, y
ca á nosotros referir por menor
º todas sus acciones; pero si estamos en que Aaron, mas culpable que todos, no lo fue; que la
masa de la nacion surió el castigo del crimen de su
Nº Sla obligacion de justificar á los dos pontífice. Esto es una calumnia: Aaron no fue ni el
# º hermanos de algunas acusaciones que autor de la prevaricacion del pueblo ni el mas culpa
5. 3 les han hecho los críticos antiguos y ble: cedió por debilidad á los gritos importunos de una
"N modernos de la historia santa. ” multitud sediciosa. Moisés, en verdad, pidió al Señor
Han dicho que Moisés confirió el sa gracia para su hermano y la obtuvo. Si hubiera obra—
cerdocio á su tribu y familia por un motivo do de otro modo, le habrian acusado de inhumani
de ambicion. Si este interés le hubiera dad ó de haberse aprovechado de aquella ocasion pa
guiado, habria sin duda asegurado el pon ra suplantará su hermano, El delito de Aaron no
tificado á sus propios hijos, mas bien que á quedó impune. Fue esento del contagio de que mu—
los de su hermano; mas no lo hizo asi; los hijos de rieron los prevaricadores, pero bien pronto hubo de
Moisés quedaron confundidos entre la multitud de los llorar la muerte de sus dos hijos primogénitos; fue es
levitas. En el testamento de Jacob, Leví y Simeon son cluido lo mismo que Moisés de entrar en la tierra de
tratados con poca consideracion; la dispersion de los romision y murió prematuramente por una falta tan
levitas entre las demas tribus se predijo como un cas— lgera.
tigo del crimen de su padre. Gén., c. 9. y.5. y sig. Si se atiende á la multitud y al rigor de las leyes á
¿Quién ha obligado áMoisés á conservar el recuerdo que estaba sujeto el sumo sacerdote, á la pena de
de aquella mancha que habia recaido sobre su tribu? muerte en que incurria si delinquia en sus funciones
No atinamos, pues, en qué podia escitar la ambicion el y á la especie de esclavitud á que estaba sujeto, se ve
sacerdocio judáico. Los levitas no tuvieron parte en la rá que esta dignidad no era muy apropósito para esci
distribucion de las tierras: estaban diseminados entre tar la ambicion. V. LEVITA, PoNTífice, sACERDoTE, sA
las otras tribus y obligados ádejar su familia para ir CERDOCIO.
á desempeñar sus funciones en el templo de Jerusalen; La rebelion de Coré y de sus partidarios y su ruido
su subsistencia era precaria; estaban espuestos á per so castigo han suministrado á los incrédulos nuevos
derla cuando el pueblo se entregaba á la idola motivos de malignidad. Coré, gefe de una familia de
tria. Una prueba de que el sacerdocio no era por levitas, envidioso por la eleccion que Dios habia he
sí mismo origen de prosperidad, es que la tribu de cho de Aaron para el pontificado, se unió con Da
Levi fue siempre la menos numerosa, como se ve por thán, Abiron y otros doscientos cincuenta gefes de
los empadronamientos que se hicieron en diversas familia y vitaperaron á Moises y á su hermano la au
épocas. toridad que ejercian sobre el pueblo del Señor, Moi
P. cierto que el autor del Eclesiástico, c. 5, }. 7, sés les respondió con moderacion que solo á Dios
hace un elogio magnífico de la dignidad de Aaron, competia designar á los que se dignaba investir con
y de los privilegios anejos á su sacerdocio, pero los el sacerdocio, y rogó á Dios confirmara con el castigo
considera bajo un aspecto religioso, mas bien que por ejemplar de los rebeldes la eleccion que habia hecho
el de las ventajas temporales; el privilegio de subsis de Aaron y de sus hijos. En efecto la tierra se abrió
tir con las ofrendas de las primicias y con una porcion y tragó á Coré con sus cómplices y toda su familia y
 ABA 2 ABA

un fuego del cielo consumió á los otros doscientos cin ligiosas, y abadias á los monasterios. La jurisdiccion,
cuenta culpables. Núm. c. 16. . -
los derechos, los privilegios de los ¿. y de las
Vituperará Moisés por este castigo, considerándo abadesas han sido fijados por las leyes eclesiásticas; es
lo como un rasgo de crueldad, es verificarlo respec uno de los artículos de la jurisprudencia canónica. Nos
to de Dios mismo, es levantarse contra Dios. Ni Moisés basta observar que la multitud de abadias de uno y
ni su hermano tenian el poder de hacer abrir la tier otro sexo nada tienen de estraño para los que cono
ra, ni de hacer caer el fuego del cielo, y este prodigio cen el triste estado de la sociedad europea en el si—
se obró á la vista de todo el pueblo congregado. Ha glo X y siguientes; no solo eran los monasterios los
bria aprobado Dios con un milagro la ambicion ó la únicos asios abiertos á la piedad, sino tambien el so
crueldad de los dos hermanos? lo recurso de los pueblos oprimidos, despojados, redu
En vano algunos críticos han querido suponer ana cidos á la esclavitud por los señores siempre armados
logia entre la historia de Aaron y la fábula de Mer y encarnizados en hacerles una guerra contínua. Este
curio; pues su paralelo es bastante forzado. Homero y hecho está confirmado con la multitud de pueblos y
Hesiodo conocieron la fabula de Mercurio mucho tiem villas construidas al rededor de las abadias. Los pue
po antes de que los griegos pudieran lener conoci blos encontraban en ellas todo género de socorros es
miento de la historia de los judios. Herodoto, que vi pirituales y el reposo y seguridad de que no podian
vió cuatrocientos años despues de aquellos dos poetas. gozar en otra parte.
conocia muy poco á los judios. Otros han creido que Jamás se ha declamado tanto como en nuestros
el personage de Mercurió habia sido copiado por el de dias contra las riquezas, suntuosidad y magnificencia
Eleazar sustituto de Abraham: pero no han librado de las abadias: al aúl en nuestros diccionarios geo
mejor que los primeros. Es muy facil abusar de esta gráficos de los pueblos y aldeas donde existe alguna
clase dé paralelos entre la historia Sagrada y la fábu— abadia, tratan sus autores de hacer resaltar la opulen
ia, y no vemos qué utilidad puede resultar de aqui. cia de esta última, y la pobreza y miseria de los pue
Los que quieran consultar las alegorias orientales de blos del canton, insinuando que esa vecindad fatal es
M. de Gebelin, pág. 110 y sig. veran que no ha sido la que arruina á los colonos.
necesario copiar la historia Sagrada para forjar la fá . Tan fundada es esta observacion como si se pusiese
bula de Mercurio. en oposicion la magnificencia del palacio de Versai
a S-Puede tambien creerse que proponiendo á las lles y el lujo de la gol le con la multitud de pobres reu
mugeres y jóvenes israelitas el despojarse de sus ador nida en esa ciudad; ó la miseria esparcida sobre las
nos, se promelia Aaron eludir las exigencias de una calles de Paris, con la suntuosidad de los palacios de
multitud fanática y sediciosa; suponiendo que la na los aristócratas y de los capitalistas. Los pobres se
tural repugnancia de aquellas á dejar sus galas, triun reunen en esas dos ciudades, porque esperan encon—
faria de la supersticion. Sin embargo habria sido lo trar un auxilio en la caridad de los príncipes y de los
mejor no cederá consideraciones ni temores, y haber grandes: del mismo modo las abejas se estienden
preferido la muerte misma á una condescendencia cri en los prados donde hay flores que chupar, y no en los
minal; pero ya dice Bergier que el arrepentimiento campos labrados, en donde no se ve ninguna. Lo mis
fue consiguiente á la falta cometida. mo pensamos de las abadias y de los ricos monaste—
Algunos pretendidos magos han invocado á Mer— rios; y si los miserables nada encontrasen alli, irian á
curio por su patron, y muchos herejes en los primeros otra parte á buscar su subsistencia. Las reflexiones de
tiempos de la Iglesia han querido hacerle pasar por nuestros censores políticos prueban precisamente lo
Moisés y por Aaron. Un hombre llamado Nocto (239 contrario de lo que pretenden.
años despues de Jesucristo) fingia ser Moisés y que su Acaba de aparecer una obra titulada: Observacio
hermano era Aaron; pero esta secta desapareció ape nes de un ciudadano solitario, en la gual el autor ha
nas habia nacido. El docto Francisco Junio en el si probado con razones muy sólidas que á no mirar las
glo XVI colocó á Aaron, á causa de la construccion abadias y monasterios sino bajo un aspecto político,
del becerro de Oro, á la cabeza de su catálogo de los estos establecimientos son muy ventajosos, y que des
antiguos escultores, pintores y estatuarios. Aun cuan truyéndolos ó cambiando su destino se produciria mas
do el orden alfabético no le hubiera señalado el pri mal que bien; ha respondido de una manera muy sa
mer lugar, lo merecia bien por derecho de anti tisfactoria á las objeciones que han compilado en sus
güedad. disertaciones los censores d estado monástico.
Sin entrar aquien muchos pormenores, es eviden
Ab, alaba. V. PADRE. te: Primero. Que en todas las abadias y monaste
Abaddon, nombre del angel esterminador en el rios en regla, las rentas se consumen en los mismos y
Apocalipsis: se deriva del hebreo ABAD, PERDER, DEs en los pueblos vecinos, en vez de que si se dieran á
TRUIR.
seculares se gastarian en la corte, en la capital ó en
Abada, Abad, Abadesa. Un cuerpo, una cualquier otra morada lejana del pais y de la habita
comunidad cualquiera no puede subsistir sin subordi— cion de los colonos. Segundo. Que por medio de las
nacion; necesita un superior que mande é inferiores encomiendas no hay especie alguna de rentas que es—
ue obedezcan; entre miembros iguales y que tienden len mas inmediatamente á la mano del gobierno,
la perfeccion, la autoridad debe ser dulce y carila puesto que el rey dispone de ellas á cada paso, y que
tiva; no se puede dar á los superiores de los mo pueden emplearse en utilidad pública por medio de
nasterios un nombre mas conveniente que el de pa— las centralizaciones, economatos, pensiones, etc. Ter
dre; esto es lo que significa abad, por la misma ra cero. Que en todas las calamidades que afligen á los
zon se ha llamado abadesas á las superioras de las re campos, no hay ningun recurso mas pronto ni mas
 ABAN 3. ABAN
cierto que el que se puede encontrar en las abadias. » llamado y vosotros me habeis despreciado; yo os he
Si se formara una lista de las buenas obras que se »tendido los brazos y ninguno de vosotros me ha he—
hacen diriamente en los monasterios, los enemigos » cho caso.... Yo tambien me reiré é insultaré vues
de los monges se avergonzarian de sus declamacio »tra desgracia cuando os sucedan los males que te—
nes. Cuarto. Que esos vastos edificies que insultan, » meis.... Entonces me invocareis y no os escucharé:
segun dicen, á la miseria pública, se han edificado »me buscareis y no me encontrareis.... Mas el que
con el auxilio de los brazos de los operarios de la co » me escuche descansará sin temor, vivirá en la abun
Inarca, que con ello han ganado su vida; confor » dancia y no tendrá que temer mal alguno.» No y e—
mándose de esta manera con la opinion de nuestros mos cómo se puede deducir de aqui que hay un mo
filosofos políticos que sostienen que la mejor especie mento fatal en que Dios no escucha á los pecadores,
de limosna es el hacer trabajar al pueblo. Sobre este los abandona enteramente, les rehusa todo género
mismo asunto pudiéramos hacer otras muchas obser de gracia y los deja perecer. 1." Es evidente que
vaciones. V. MUNGE, MoNAsTERIo.
el Sabio habla de males temporales, y no de la re
probacion de los pecadores. 2." En vano seria que
Abandono. Hay en la Sagrada Escritura pasa añadiese: el que me escuche, etc. Los pecadores pueden
ges que parecen probar que Dios abandona á los pe escuchar á Dios, cuando ya no les habla por medio
cadores y aun á naciones enteras; pero hay otros que de la gracia? 3." Esta opinion es enteramente
nos aseguran que Dios es bueno con respecto á todos, contraria á la promesa que Dios ha hecho por
que de todos tiene piedad, que no tiene aversion há medio de Ezequiel, c. 33, y . 1 : «Aun cuando
cia ninguna de sus criaturas, que sus misericordias » yo hubiera dicho al impío morirás, si hace peni
se estienden sobre todas sus obras, etc. Los primeros »tencia y practica la justicia, vivirá y no morirá.»
no quieren decir que Dios prive absolutamente de Luego el impío no puede hacer penitencia á no ser
lodas sus gracias á los pecadores ó á las naciones in que Dios le dé la gracia.
fieles, sino que no les concede tantas como á otros Todos los Padres de la Iglesia han insistido sobre
pueblos, ó que no les dispensa tanto bien como an este pasage y el que le precede y 11. «Afé mia, di
tes les dispensaba. Es un uso comun á todos los idio »ce el Señor, no quiero la muerte del impio, sino que
mas espresar en términos absolutos lo que no es ver » se convierta y viva.» De aqui han concluido que la
dad sino por comparacion. Asi, cuando un padre misericordia de Dios iamás abandona enteramente á
no cela la conducta de su hijo con tanto cuidado co— los pecadores. Dios dice en el Apocalipsis c. 3., y.
mo lo hacia antes, se dice que le abandona; si ma 19. «Haced penitencia, yo estoyá, la puerta y llamo;
nfiesta al hijo menor mas cariño que al primogénito, »si alguno me abre, emiraré en él.» No hace excep
se dice que este es desamparado, despreciado, mi cion alguna. Jesucristo se nos representa, no como
rado con aversion, etc. Estos modos de hablar no son un juez sediento de justicia, sino como un Salvador
absolutamente verdaderos; nadie se equivoca en su misericordioso, que teme perder un alma y el precio
acepcion; de consiguiente no deben sorprendernos en de la sangre que perdió por ella.
la Sagrada Escritura mas que en el lenguage ordi Sin embargo, algunos teólogos sostienen que no es
Ild Tl 0. esta la opinion de S. Agustin. Este gran Padre, di
En efecto, á pesar de las promesas formales que cen elles, ha repetido veinte veces que Dios no aban
Dios habia hecho á los judios de no abandonarlos ja dona al justo, á no ser que este abandone antes á
más, no dejaban de decir en todas sus calamidades: Dios. Aplica este mismo principio á nuestro primer
El Señor nos ha abandonado, nos ha olvidado. He padre serm. I. in Ps. 58, n. 2, dice que Dios aban.-
aquilo que les responde el profeta Isaias de parte de donó á Adan, porque el mismo Adan abandonó á
Dios, c. 9, y. 1 : «Una madre ¿puede olvidar á Dios; luego supone que cuando un justo abandona á
»su hijo y dejar de tener ternura hácia el fruto de sus Dios es á su vez abandonado. L. 3. de pecc. meritis et
» entrañas? Aun cuando ella pudiese hacerlo, yo no remisis, c. 13. n. 22. El santo doctor pretende que
»os olvidaré» El pretendido abandono de que se en algunas ocasiones Dios no ayuda á los justos ¿
quejaban los judios, consistia solamente en que Dios que pueden envanecerse; opina que Dios les rehusa
no los protegia ya de una manera tan manifiesta, ni la gracia y los deja caerá fin de humillarlos con su
ies dispensaba tantos beneficios corno otras veces. caida. Ahora bien, si niega algunas veces la gracia
Lo mismo debemos juzgar y entender de la Escri á los justos, con mas razon lo hace respecto á los pe
tura Sagrada con respecto á las gracias para la sal cadores. Cuando estos quieren escusarse diciendo:
vacion y socorros sobrenaturates. En el artículo Gra «Por qué somos nosotros culpables en vivir mal si no
cia, S. 3.º, probaremos por medio de la Santa »hemos recibido la gracia para vivir bien?» San
Escritura, por los Padres de la Iglesia y por la efi Agustin responde, Epist. 19' ad Siartum, c. 6. n. 22.
cacia de la Redencion, que no hay criatura alguna «Si son del número de los vasos de cólera deslinados
»á la perdicion, que se culpen á sí mismos, porque
bajo del cielo á quien Dios deje carecer de sus gracias
absoluta y enteramente, mas no lo hace de igual » han sido hechos de esa masa que Dios ha condena
modo y con la misma medida á todos los hombres; »do justamente por el pecado de uno solo, en el
a los unos se las dispensa mas abundantes y efica »cual lodos han incurrido.» Asi, este sanlo Padre su
pone que la gracia les fue negada á causa del pecado
ces que á los otros, y solo en este sentido son estos
abandonados en comparacion de los primer s. original. Por último, tract. 38. in Joan. n. 6. dice
Algunºs acusadores de la Providencia alegan un «que Dios ciega y endurece á los pecadores, no obli
pasage del libro de los Proverbios, c. 1 ... y 2, »gándoles al al sino dejando de socorreros y por con
donde la Sabiduria dice á los pe adºres: «Yo es le » sigui ile al a do áct los »
 ABA k ABD

Es admirable que los que imputan á S. Agustin es » humilló y se hizo obediente hasta la muerte y muer
la doctrina absurda no hayan visto que se hacen in »te de cruz; por lo que Dios le ha exaltado y dado
currir en groseras contradicciones. 1. El justo ne » un nombre ¿? todo nombre y porque en nom
cesita la gracia previente, no solo para hacer el »bre de Jesus, todo se arrodille en el cielo, sobre la
bien sino para perseverar en él; si llega á abando »tierra y en los infiernos, y para que toda lengua
nar á Dios ó á pecar, puesto que le falta la gracia, »publique que nuestro Señor Jesucristo goza de la
no es él el que deja á Dios, sino Dios el que le aban »gloria de su Padre.». Filip c. 2, y 7 y 8. De esto
dona primero: , y en este caso ¿qué es de ese princi se deduce que el hijo de Dios, haciéndose hombre,
pio tan repetido por S. Agustin de que Dios jamás nada ha perdido de su grandeza. Dicen los Padres de
abandona al justo, á no ser que sea abandonado pri la Iglesia que nada es mas digno de la magestad di
mero? Cuando Adan pecó por la vez primera ¿habia vina que obrar la salvacion de sus criaturas; era
ya abandonado á Dios? ó se le negó la gracia por ha preciso todo este exceso de abatimiento de parte del
ber nacido de la masa de perdicion? Cuando los pe Verbo encarnado, para curar al hombre del orgullo
cadores quieren imputar á Dios la causa de sus crí escesivo que le habia inspirado una falsa filosofia, y
menes, S. Agustin les opone este pasaje del Eclesiásti para consolar á la mayor parte del género humano
co, c. 15. y. 11: «No digais, Dios me falta, él es el de la humillacion á que estába reducido.
que me ha estrariado. Dios no necesita de los impios etc.
Lib. de grat. et Lib, arb, c. 2. n. 3. decir Dios me fal. Andas. V. CELo DE LA RELIGION.
ta ó Dios me deja carecer de gracia, es la misma cosa; Abdemago. V. NIÑos EN EL IIoRNo.
luego segun el autor sagrado y S. Agustin es una blas Abdias. El cuarto de los doce profetas meno
femia. 3." Este santo doctor ha repelido veinle ve res; vivia en el reinado de Ezequias por el año 726
ces que no hay que desesperar de ningun viviente, antes de Jesucristo; predijo la ruina de los lolumeos,
Enarr. 2. in Ps. 36 n. 11. etc., ni aun de los impíos, el regreso de la cautividad de Judá, la venida del
in Ps. 50. n. 18; que el demonio es la única criatura Mesías y la vocacion de los Gentiles; pero estas úl
de cuya conversion es preciso desesperar, in Ps. 5. limas predicciones no parecen tan claras como las
n. ... Dice confess. lib.8. c. 11, n. 27. «Arrójate en primeras. No debe confundirse á este con otros mu
» los brazos de tu Dios; no temas nada: no se retirará chos Abdias de los que tambien habla la sagrada Es
» para que tú caigas elc.» Qué significa todo esto, si critura, á saber 1.° un Abdias intendente de la ca
no que Dios puede abandonar absolutamente, no solo sa de Achab que ocultó en la caverna de una monta—
á los grandes pecadores sino tambien á los justos, á ña, á la que dió su nombre, cien profetas para sus
fin de humillarlos? traerlos del furor de Jezabel; 2.° un intendente de
Busquenos un medio de librar á S. Agustin de los las haciendas de David; 3." uno de los generales
absurdos que se le imputan, Serm, I in Ps. 58. n. 2. del ejército del mismo rey; ," un levita que resta
dice que Ádan despues de su pecado fue privado de la bleció el templo en el reinado de Josías.
alegría y consuelo que gozaba antes viendo á Dios y ABDAS de Babilonia, autor supuesto de una his
conversando con él, ¿ que se ocultó; luego Dios toria del combate de los apóstoles. Dice en el pre
se retiró de él y le abandonó. La Escritura nos lo en facio, que vio á Jesucristo que era del número de
seña, y de aqui no se deduce nada. los setenta y dos discípulos, que siguió en Pérsia á
Lib. 3. de pecc meritis et remisis, cap. 13 n. 22. San san Simon y san Judas, los cuáles le ordenaron pri
Agustin no dice que Dios niega algunas veces á los mer Obispo de Babilonia. Pero cila al mismo tiempo
justos la gracia para hacer el bien, sino para hacerle á Hegesipo, quien no vivió sino ciento treinta años
perfectamente, ad perficiendam justitiam ; y esto es despues de la ascension de Jesucristo, y quiere ha
verdad; Dios no da siempre á las almas mas santas la cernos creer que habiendo escrito él mismo en he—
fuerza de practicar el bien con tanta perfeccion como breo su obra fue traducida al griego por un discí
quisieran; esto es lo que las aflije, humilla y atormen pulo suyo llamado Eutrapo, y del griego al latin por
la por sus escrúpulos; ¿Y se deduce de aqui que un tal Julio Africano, que vivia el año 221. Estas
Dios es rehusa las gracias necesarias para evitar el contradicciones manifiestan que el pretendido Abdias
pecado y perseverar en el bien? es un impostor. Wolfang Lazius, qie encontró el ma
Epist. 19 ad Siact. cap. 6. n. 21 y 22. S. Agustin nuscrito de esta obra en el monasterio de Ossak
habla, no de la gracia actual, sino de la gracia final, en el Carintia le imprimió en Bale el año 1351, co—
del don de la perseverancia y de la predestinacion á mo un monumento precioso. Se han hecho de esta
la gloria eterna. Convenimos desde luego con San historia otras muchas cdiciones sin que haya ad
Agustin, que este dón no es debido a nadie, que quirido mayor autoridad.
Dios puede negarle á quien lo tuviere á bien y que no
tienen derecho de quejarse aquellos á quienes no les Abd Ass , Abdjesu ó Ebedjesu, V. CALDEos.
fuere concedido; que esto no puede escusar á los pe Abecedarios, rama de anabatistas que pre
cadores como lo pretendia Pelajio. Ya trataremos es tendian, que para salvarse, era preciso no saber
ta cuestion en las palabas PERsevEnANcIA y PRE leer ni escribir V. ANABATstas.
orsTINActon V. GRacia, S. 3.” Abel, hijo segundo de Adan. Segun la historia
sagrada, Cain su hijo primogénito cultivaba la tier
Abatiam en to. Los libros del nuevos Testa ra, y Abel se dedicaba al cuidado de los ganados; el
mento nos hablan con frecuencia de los abatimientos primero ofrecia á Dios los frutos de la agricultura,
6 humillaciones del Verbo encarnado. «Se anonadó, el segundo le presentaba la manteca ó la leche de lo
» dice S. Pablo, y tomó la fornia de un esclavo, se animales; era natural que los hombres orecieran á
 ABE 5 ABE

Dios en señal de reconocimiento, los alimentos que A pesar de los esfuerzos de Bayle y de sus copis
les concedia su bondad. Dios se mostró grato á los tas, resulta por sus confesiones. 1.º que el desar—
dones de Abel, y no hizo caso de los de Cain. Este, ¿de las costumbres de Abelardo no provino de
envidioso de la prosperidad de su hermano, concibió debilidad sino de un fondo de perversidad natural;
contra él un odio violento y le mató. habia formado el designio de seducir á Heloisa an
Los sueños que han escrito los rabinos sobre la tes de que fuera su discípula; con esta intencion se
conducta de Abel no merecen atencion alguna: la hizo pupilo del canónigo Fulberto y le ofreció dar
simple y natural relacion de la Escritura dá origen lecciones á su sobrina; y esto lo cónfiesa él mis
á muchas reflexiones. 1." La suerte de los dos her mo en la relacion que hace de sus desgracias.
manos debió hacer conocer á nuestros primeros pa 2." La vanidad, la presuncion, los celos, el carac
dres las terribles consecuencias de su pecado y el ter mordaz de Abelardo se manifiestan en sus escritos
esceso de miserias á que estaba condenada su pos y en su conducta. Su ambicion era vencer á sus maes
teridad. 2.º El destino de Abel manifiesta que la tros en la argumentacion, establecer su reputacion
virtud no encuentra recompensa en este mundo; Dios sobre la ruina de las suyas, quitarles sus alumnos
habia dicho á Cain cuando meditaba su crimen: «Si
y grangearse el séquito de la multitud de discípulos.
obras bien, recibirás la recompensa. Si obras mal, Se ve por sus obras que atraia á sus oyentes, mas
tu pecado será contra tí». Sin embargo Abel recibió por sus talentos esteríores que por la solidez de su
por recompensa de su piedad una muerte violenta doctrina; su elocuencia era seductora, pero no ins
y prematura. Dios, pués, ha cumplido su palabra truia. Se hizo enemigos deliberadamente solo por el
en la otra vida Segun S. Pablo, Abel por su fé, placer de desafiarlos. Envidioso de la reputacion de
ofreció á Dios mejores sacrificios que Cain; por eso San Norberto y de la de San Bernardo, calumnió á
mereció el nombre de justo: el miso Dios ha ma— ambos.
nifestado agradecimiento á sus ofrendas y por esta fé 3.° Se puso á profesor de teologia sin haberla
habla aun despues de su muerte, Hebr. c. 11, y . . . estudiado suficientemente; unió á esto las frívolas su—
¿Cuál puede haber sido la fe de Abel sino una fir tilezas de su dialéctica y un juicio erróneo, co
me creencia en la vida futura? El testimonio que mo es evidente por la primera obra que publi—
Dios ha manifestado sería ilusorio, si la piedad de có. Nada mas absurdo que dar un tratado de la fe
Abel, quedara sin ninguna recompensa, y la indul— debida á la Santisima Trinidad, para servir de in—
gencia con que Dios trata á Cain despues de su troduccion á la teología; y querer esplicar este mis—
crimen seria un nuevo motivo de escándalo. V. CAIN. terio por comparaciones sensibles; pues si pudiera
Como S.Cipriano, lib. de bono patientiae. ha ala ser comparado á alguna cosa., ya no sería un mis—
bado á Abel por no haberse defendido contra su terio ó un dogma incomprensible.
hermano, y por haber dado asi un egemplo de la l." Sus apologistas se ven precisados á conve
constancia de los mártires y de la paciencia de los nir en que ¿ errores en esta obra y en las de
justos. Barbeyrac acusa á este Santo Padre de haber mas; no fue pues injustamente condenado en un
destruido de esta manera el derecho natural que concilio de Soisons el año 1121, y obligado á retrac
consiste en una justa defensa de sí mismo. Tratado de tarse. Este acontecimiento hizo con razon mas cir
la moral de los Padres, c. 8. S. 1. cunspectos sobre su doctrina á los obispos y de
¿Pero el derecho de la propia defensa y la obliga mas teólogos. Veinte años despues Guillermo, abad
cion , de hacerla son una misma cosa? Barbeyrac de Saint-Tierry creyó encontrar nuevos errores en
conviene en que no; que hay casos en que puede ser los escritos de Abelardo y envió un resumen de ellos
laudable que un jusio se deje quitar la vida, mas su refutacion á Geoffroy, obispo de Chartres, y á
bien que malar al injusto agresor, y pone por ejem n Bernardo, abad de Clairvaux. ¿Hay algun moti
plo á Jesucristo y á los mártires. La cuestion, pues, se vo para argüir de envidia, odio ó prevencion en con—
reduce á saber si Abel tuvo algun motivo laudable tra al abad de Saint-Tierry? San Bernardo, lejos de
para dejarse quitar la vida: nosotros sostendremos demostrar estos senlimientos hácia Abelardo, le es—
desde luego que el designio de dejará su herma cribió para moverle á retractarse corregir sus li
no tiempo para hacer penitencia, de dar á sus propios bros. Preocupado este, no quiso hacer caso, quiso
un ejemplo, de paciencia, y de dejará Dios esperar la decision del concilio de Sens, que estaba
solo el cuidado de su venganza, son motivos muy próximo á reunirse, y pidió que San Bernardo con—
laudables, por lo que San Cipriano no le ha ala curriese á él. Con efectó, el abad de Clairvauar se en
bado injustamente. V. DEFENSA DE sí mismo. contró en él; produjo las proposiciones extractadas
de las obras de Abelardo y le requirió á su justi—
Abelardo (Pedro). Doctor célebre del siglo doce; ficacion ó retractacion.
murió el año 1142. Ñada tendriamos que decir de Entre estas proposiciones que pueden verse en el
él sino se hubiera trabajado tanto en nuestos dias Diccionario de las herejias, artículo Abelardo, hay
para renovar su memoria, en hacer la apología de cuatro que son pelagianas: tres sobre la Trinidad, cu
su doctrina, y en dar al desarreglo de su juventud yo sentido literal es herético; en otra enseña el autor
toda la celebridad posible. Lo que de él se ha dicho el optimismo; en la catorce sostiene que Jesucristo
está sacado del-Diccionario de Bayle, en los artículos no bajó á los infiernos. Qué le impedia retractarse de
Abelardo, Beranger, Heloisa. Acúsase á S. Bernardo las uñas y esplicar las otras, como se vió precisado á
de haber perseguido á Abelardo por envidia de su verificarló despues? Sin querer, hacerlo en el concilio
reputacion. ¿ Brucker y otros protestantes de Sens apeló á la decisíon del Papa y se retiró. Por
han adoptado al momento esta calumnia. respeto á su apelacion el concilio se contentó con cón
TOM) 1. 7
 Al}E 6 ABE
denar las proposiciones, y no produjo censura alguna veneracion hácia S. Bernardo, conócese el estudío
contra su persona. con que están presentadas, y se descubre una ten
Se dice para escusarle, que conoció muy bien que dencia manifiesta á disminuir las faltas y errores del
san Bernardo y los obispos del concilio de Sens esta famoso enamorado; al paso que tan demasiada indul
ban prevenidos contra él, y que su justificacion de gencia con este, se convierte en justicia y en falta
nada hubiera servido. Mal pretesto de que cualquiera de piedad para con un Santo á quien la ciencia, la
uede echar mano cuando lo tuviere á bien. Sin re historia y la crítica vindican de la manera mas so—
erirse desde luego al juicio del concilio, el apelar de lemne. No puede leerse una página imparcial sobre
él antes de haber sido pronunciado es una prueba de esla materia, de la cual no aprendamos que, como
mala fé; los obispos eran sus legítimos jueces; al re dice el historiador Berault Bércastel, fue adrertido
husar justificarse merecia ser condenado. Abalardo caritaticamente por S. Bernardo, que sabia
En efecto lo fue en Roma lo mismo que en Sens, y enseñaba á todos las reglas de conducta que recla
¿Es tambien el odio ó la envidia lo que movió al Pa— man semejantes cuestiones. Hé aquí cómo entendia
pa y á los cardenales á pronunciar contra él el ana el celo S. Bernardo, cómo el amor, cómo la ciencia
tema? Solo despues de esta condenacion hizo su apolo y el escándalo. Habet rera amicitia nonnumquan
º y profesion de fe, en la cual retractó formalmente objurgationem, adulationem nunquam (Epist. 22).
a mayor parte de las proposiciones que le habian si Melius est ut percat, unus, quan unitas (Epist. 102).
do reprobadas y esplicó las otras. Eruditio absque dilectione inflat, dilectio absque cru—
El gran cargo que se hace á San Bernardo esel ha ditione errat (Serm. 69 in Cant). Melius est ut scan
berse espresado con demasiada dureza con respecto dalum oriatur, quam ceritas relinquatur. (Epist. 78).
á Abelardo en las cartas que escribió á Roina y á los Mas si todo esto no basara para aquietar á ciertos
obispos de Francia con este motivo; mas no lo hizo espíritus compasicos, todavia pudieran tranquilizar
sino despues de haberse negado Abelardo á esplicarse y se con la idea de que si las imputaciones de S. Ber
retractarse. Esta conducla debió hacer creer al Santo nardo previnieron tristemente al concilio de Sens
Abadque estenovadorera unobstinadoherege. Mosheim contra la llorada víctima de Bayle y de los protestan
y Brucker dicen que San Bernardo no entendia las su les, descansa el sentimiento católico al ver que se
lilezas de la dialéctica de su adversario: mas se enten fulminó el mismo anatema en Roma; y que Inocen
dia este á si mismo? Se ve por las obras del primero, cio Il confirmó los decretos del concilio mandando
que era mejor teólogo que su antagonista, que sin que fuesen queinados los libros de Abelardo, y pro
degradarse Abelardo hubiera podido admitirle por su hibiéndole que enseñara en lo sucesivo. Parece pues
maestro ópor su juez. Verdad es que los prolestantes que el Diccionario de las heregias ha descolorado las
que atribuyen odio, envidia, violencia, injusticia negras tintas de un retrato, para animar horrible—
contra la inocencia perseguida al abad de Clairvaux se mente las facciones dulces y risueñas de un Santo
hacen á si mismos culpables de todos estos vicios. que venera la lglesia como Padre y Doctor.
5.” Parecen insinuar que fue condenado y perse—
guido no por sus errores sino por haber sostenido Abelianos ó Abeloitas, secta de hereges
ante los monges de San Dionisio, que su santo no era poco conocida y no muy numerosa, que ha subsis
San Dionisio Areopagita; esto es una impostura. Es— tido algunos años cerca de llipona en Africa. Aunque
te punto no fue puesto en cuestion ni en Soisons, casados, se abstenian de todo comercio conyugal
ni en Sens, ni en Roma; Abelardo fue condenado por con sus mugeres: el motivo de tan estraña conducta
los errores que habia enseñado sobre la Trinidad, so sería probablemente el imitar la castidad de Abel, de
bre la encarnacion, sobre la gracia y sobre otros quien se supone que nunca tuvo hijos. Pero apesar de
muchos puntos importantes. la poca certeza de este hecho, habria sido mas senci—
6.º Cuando Pedro el Venerable, abad de Cluni, llo no contraer matrimonio. Esta continencia Inal en—
dió un asilo á Abelardo y le convirtió, San Bernardose tendida no podia menos de producir bien pronto el
reconcilió con él de buena fé, y no trató de turbar su desórden en un clima como ¿ Africa. Cualesquic
reposo: no tenia pues ódio contra él; pero á los ojos ra que puedan ser sus motivos no merecen la pena del
de los incrédulos los hereges tienen siempre razón, trabajo que muchos escritores se han tomado por adi
los Padres de la Iglesia carecen de ella. Censuran en vinarlos. San Agustin, de Haeres, núm. 87.
las obras de San Bernardo los defectos de su siglo y Mosheim, historia , eclesiástica, siglo II parte
los disculpan en las de Abelardo, donde resaltan mas. 2... c. 5, n. 18, ha confundido á los Abelianos con una
V. San Bernardo, Hist. de la Igl. Gallic., tom. secta de gnósticos. Nos parece que se ha equivocado;
8. año 1117 y siguientes; tomo 9, año 1139.-112, etc. San Agustin habla de los de Africa como de una
<2 =S" La remision que hace Bergier al Diccio secta que acaba de estinguirse y que no habia dura
nario de las heregias, merece una advertencia á los do mucho tiempo.
lectores: cabalmente en el artículo Abelardo, pri
mero de dicho Diccionario, se ensalza de una manera Abgaro. Rey de Edesa, ciudad dela Mesopotamia:
el mérito y capacidad del héroe de los amoríos y de es conocido en la historia eclesiástica por lo que cuen
la veleidad, y se trata con tan poco respeto á S. Ber. la de él Eusebio, lib. 1, cap. 13,; dice que este rey
nardo, que aparece el primero como una víctima de escribió á Jesucristo, rogándole pasara á curarle de
las acusaciones mas horribles, indiscretas y destitui una enfermedad; que el Salvador le respondió pro
das, no solo de fundamento, sino aun de apariencia, metiéndo enviarle uno de sus discípulos; que despues
por parte del Santo Doctor. Y aunque el autor Mr. de la ascension, santo Tomás envio en efecto á S. Ta
Pluet hace luego salvedades justas y protestas de deo quien curó áAbgaro y convirtió la ciudad de Ede
 A 3 7. ABl
sa. Eusebio trascribe la carta y la contestacion y pre los mismos personajes que los sacrificadores de la
tende haberla sacado de los archivos de la ciudad de ciudad de Nobé, de que se habla en el cap. 21, del
Edesa. libro 1” de los Reyes.Véase la biblia de Chais sobre
Sabios críticos miran estos dos documentos como este objeto.
supuestos; Tillemont, Cave y otros los admiten como Abisinios. V. ETIopEs y FALAsiIAs.
auténticos, y satisfacen las objeciones ue se les opo
nen. Mosheim no se atreve ágarantizar la autenticidad Abismo, palabra griega que significa sin fondo.
de estas cartas; pero no halla motivo para rechazar Esta palabra se toma en la Escritura, 1.° por la in-.
la historia que ha dado lugar á ellas. Otros protes mensidad de las aguas que rodeaban el globo terres
tantes mas atrevidos suscriben igualmente cóntra la tre en el momento de la creacion , y antes de que
historia y contra las cartas, pero solo alegan pruebas Dios las hubiera encerrado en un mismo lugar; Gén.
negativas. c. 1, y. 2 y 9.2." por la mar, hablando del diluvio
No es muy necesario á un teólogo el tomar parti— se dice que se rompieron las cataratas del Abismo,
do en esta disputa que es en el fondo muy indiferente es decir, que la mar salió de madre. Gén. c. 7, y. 11.
á la religion católica. Ningun hecho, ningun dogma, lablando de los egipcios sumergidos en el mal rojo,
ningun punto de moral se funda en este monumento; Moisés dice que fueron tragados , por los abismos.
y por esto mismo no parece probable que se haya Exod, c. 15, y.5 º etc. 3.° por los sitios mas pro—
echo una supercheria sin motivo. La carta de Abya fundos de la mar. Ecles cap. 1, y . 2. ...º por el in—
ro, pudiera proporcionar una prueba mas de la reali ierno; esta representado como un golfo colocado
dad del brillo de los milagros de Jesucristo; pero te bajo las aguas y hácia el centro de la tierra, en el
nemos otros muchos para que esta no nos sea necesa— cual están encerrados todos los impíos, los gigantes
ria. Véanse las notas Variorum sobre la hist. eclesiást. que atemorizaron á los pueblos, los reyes de Tiro,
de Eusebio y Tillemont, tom. 1, p. 360 y sig. de Babilonia, de Egipto siempre vivos y padeciendo
siempre el castigo de su orgullo de su crueldad.
Abathar, hijo de Achimelech, décimo pontí Isaias hablando de la muerte del rey de Babilonia
fice de los judios despues de Aaron. Dícese en el libro le apostrofa del modo siguiente : «Tu llegada ha
de los Reyes, c. 21, y, 18 y sig. que Saul habiendo turbado los infiernos, ha despertado á los gigantes,
sabido que Achimelech habia proporcionado á David los reyes de las naciones se han levantado de sus
víveres y una espada, hizo degollará este sacrifica asientos y te dirán: héte pues ya castigado como nos
dor y á todos los de la ciudad de Nobé, en número de otros y hecho igual á nosotros. Tu orgullo ha sido
ochenta y cinco hombres y pasó á cuchillo á todos los precipitado á los infiernos, tu cadáver ha caido y se
habitantes de aquella ciudad; que un hijo de Achi rá presa de la pobredumbre y de los gusanos etc.»
melech llamado Abiathar se salvó al lado de David, Isaias c. 1, y 9 y sig. Ezequiel dice lo mismo del
quien le tomó bajo su proteccion. De aqui se deduce rey de Tiro. c. 28, y . 8, del rey de Egipto y de sus
ue hubo entonces dos sumes sacerdotes, á saber, súbditos. c. 32, y 18 y sig. El abismo se toma tam—
Sadoc en el partido de Saul y Abiathar en el de Da bien por el infierno en el Apocalipsis c. 9, 11, 20, etc.
vid. En el reinado de Salomon, habiéndose agregado Las conjeturas de los sabios sobre el modo con que
Abiathar al partido de Adonias, fué privado del sa— los hebreos concebian el centro de la tierra ó el fondo
cerdocio y desterrado á Anathots. del abismo, el origen de las fuentes y de los rios nos
Pero dice S. Marcos, c. 2, y. 26, que el hecho de importa muy poco; bástanos presentar el sentido li
David ocurrió bajo el pontificado de Abiathar. Cómo teral y natural de los libros santos; de esto resulta
se aviene esto con el primer libro de los Reyes que que se han engañado los que han asegurado que los
nos dice que sucedió en tiempo de Achimelech? antiguos judios no tenian idea alguna del infierno. V.
A esto responden t.º que en el reinado de Saul INFIERNO.
Abiathar ejercia ya el stimo sacerdocio juntamente
con su padre, lo que ha sucedido mas de una vez; y Abjuraeion. Es el juramento por el cual un
que ¿ esto el evangelista pudo nombrar uno ú otro herege convertido renuncia á sus errores y hace pro—
indiferentemente. 2.º que como Abiathar estuvo re— fesion de la fé católica; esta ceremonia es necesaria
vestido de esa dignidad durante todo el reinado de para que pueda ser absuello de las censuras en que ha
David y lambien el primer año del de Salomon, era incurrido y reconciliarse con la Iglesia.
mas fácil nombrarle á él que á su padre. Los protestantes han ridiculizado frecuentemente
Pero un autor inglés, llamado Viston, resolvió las conversiones y abjuraciones de los de su secta
de otro modo esta dilicultad; sostiene que Achimelech que volvian al seno de la Iglesia católica; para pre
su hijo Abiathar, de los que se habla en el libro de venir esa especie de desercion han sentado por má
os Reyes no son pontífices sino simples sacrificado— xima que un hombre de bien jamás cambia de reli
res, lo mismo que los otros sacerdotes de la ciudad de gion. Ño consideran que cubren de ignominia no so
Nobé, á quienes hizo matar Saul. En efecto, ni uno lamente á sus padres sino tambien á ios apóstoles de
ni otro son llamados sumos sacerdotes ó pontífices, si la pretendida reforma, que por cierto cambiaron de
no solamente sacrificadores, y no es probable que religion é indujeron á los demas á seguir su ejemplo;
Saul se atreviera á degollar dos sumos sacerdotes. hacen sospechosas las conversiones de los judios, de
Wiston pretende ademas que hay dos grandes sacer los mahometanos y de los paganos que se hacen pro
dotes llamados Abiathar, uno en tiempo de Saul que testantes; y su censura cae sobre todos los que se
era hermano de Achimelech, y otro en tiempo de Da han convertido á la predicacion de los apóstoles. Su
vid y Salomon hijo de Achimelech ; pero que no son máxima no puede fundarse sino en una indiferencia
 ABL 8) ABR

absoluta hácia todas las religiones, por consiguiente la encuentra; el segundo la busca donde no está y n n
sobre una incredulidad decidida. V. CoNVERsioN. la encuentra ni en este mundo ni en el otro. W. RE —
NUNCIA. -

Ablucion. La accion de lavarse el cuerpo.

Abogado, abogada. V. PARACLETo.
Todos los pueblos y en todas las edades han creido que
la limpieza del cuerpo era símbolo de la limpieza del Abomimable, abominaciona. Se dice en la
alma; que el pecado podia mirarse como una man historia Sagrada que los pastores de ovejas estaban
cha de la conciencia, y que lavándose el cuerpo, el en abominacion entre los Egipcios. Moisés dice á
hombre manifiesta su deseo de purificar el alma. Asi Faraon su rey que los hebreos deben inmolar al Se
las abluciones, muy necesarias para la salud, en los ñor las abominaciones de los egipcios; es decir, los
climas cálidos, donde no se conocia el uso del lino, se animales sagrados, como los bueyes, los machos ca—
convirtieron en un acto religioso practicado univer— bríos, los corderos y carneros, cuyo sacrificio debia
salmente. ¿Se ha creido por esto que esta ceremonia parecer abominable á los egipcios. La Escritura dá re
tenia la virtud de borrar el pecado á los ojos de la ¿ á la idolatria el nombre de abominacion,
Divinidad? Si los ignorantes lo han creido así, los sa igualmente á los ídolos, ya porque su culto es por sí
bios al menos han juzgado que un rito esterior no mismo abominable, ya porque casi siempre iba acom
puede ser eficaz sino mientras Dios quiera aceptarle y pañado de disoluciónes y otras groserías infames.
con tal que esté acompañado de un íntimo sentimien Tambien dá Moisés el nombre de abominables á los
to de penitencia. animales, cuyo uso estaba prohibido á los hebreos.
Parecia que las abluciones estuvieron en uso entre La abominacion de la desolacion, ó mas bien la
los patriarcas, puesto que se hablaba de ellas en el li abominacion desoladora anunciada por Daniel, cap.
bro de Job. c. 9, y. 30. Moisés prescribe á los judios 9, y.27, denota segun muchos intérpretes, el ídolo
un gran número; Jesucristo las ha consagrado dando de Júpiter Olímpico que Antioco Epifanes hizo colo
al bautismo conferido en su nombre la facultad de car en el templo de Jerusalen. La misma abominacion
borrar los pecados, (V. BAUTIsmo). La Iglesia, anima de que se habla en san Mateo, cap. 2, y . 15; en san
da del mismo espíritu, ha conservado el uso del aguaMarcos, cap. 6, y.7, es la que se vió en Jerusalen
bendila. Se sabe que los paganos practicaban di durante el último silio de la ciudad por los romanos,
ferentes abluciones ; que los mahometanos se lavan son las banderas del ejército romano, llenas de figu
muchas veces al dia, sobre todo antes de la oracion,ras de sus dioses y emperadores, y que Tito hizo tre
y que los pueblos mas groseros opinan en este parti molar en el templo y en la ciudad
cular como las naciones mas civilizadas. ró de ella.
i
que se apode

Es esta una supersticion general que se ha apode Abra. En la Escritura, significa dama de honor,
rado de todos los espíritus? Cualquiera que se per camarista, ó la criada de una mujer de alto rango.
suada de que para borrar el crímen, basta lavarse Se dió este nombre á las mujeres de la servidumbre
el cuerpo sin lener remordimiento alguno de compun de Rebeca, á las de la hija de Faraon, y á las de la
cion y de pesar, sin deseo de corregirse es supersti reina Esther, y á la camarera de Judit. No es una
cioso sin duda, abusa de un signo destinado á recor— simple esclava, ni una criada de fatiga sino una ca
darle lo que debe hacer interiormente: mas el abuso Imla"0"a.
en cualquier materia, nada prueba contra su uso úlil
en sí mismo. No hay institucion alguna de la cual no Abraham. Los diversos acontecimientos de la
se pueda abusar; la ignorancia, la estupidez, la hipo vida de este Patriarca y las discusiones cronológi
cresía jamás prescribirán contra los signos naturales cas sobre su edad pertenecen á la historia; nosotros
de la piedad y de la religion. V. Esp1AcioN. no debemos hablar sino de las circunstancias que
En térmiños litúrgicos se llama ablucion el agua y ueden dar lugar á objeciones teológicas; las otras
vino que el sacerdote pone en el caliz despues de la ¿ sido esclarecidas en nuestros dias por
sabios.
diferentes
comunion para que no quede en él nada de vino con—
sagrado. Conviene tener sumamente limpios los vasos
destinados á contener la Eucaristía. co ¿Por quéél escogió Dios á un Caldeo para darse á
y su posteridad, para hacer el origen
de su pueblo querido, en vez de escogerá un Grie
Abnegacion. Renuncia de sí mismo. Jesucristo o, á un Romano ó á un Chino? Porque Dios era due
dice en el Evangelio: «Si alguno quiere venir en pos ño de escoger y porque fuese quien fuese el preferido
de mí, que renuncie á sí mismo, tome su cruz y me tendria lugar la misma objecion. Los que dicen que es
siga. » , El Salvador, nos manda por esto sofocar el un rasgo de parcialidad, una injusta predileccion de
amor de nosotros mismos y de nuestra felicidad, y parte de Dios, no entienden los términos. Dios á ma
renunciará nuestro interés bien entendido? No, sin die debe tal ó cual porcion de beneficios naturales ó
duda; pues nos invita á la virtud por el atractivo de la sobrenaturales, de favores espirituales ó temporales;
recompensa y de la felicidad º nos promete consi lo que concede á uno no disminuye la porcion que
guientemente por un motivo de interés muy sólido. quiere dar á otro, ni le trae perjuicio alguno; la des
Quiere, pues, que renunciemos el amor de nosotros igual distribucion de beneficios puramente gratuitos
mismos, ciego y mal entendido, á nuestras pasiones, ni es una injusticia ni es una parcialidad. V. Acepciox
á nuestras viciosas inclinaciones, que erradamente DE PERSoNAs, JUSTICIA DE Dios, PARCIALIDAD.
confundimos con nuestro interés. El justo se ama mas Algunos autores han dicho que Abraham antes de
verdaderamente y comprende mejor sus intereses que su vocacion era idólatra; y han citado para pro—
el pecador; el primero busca la dicha verdadera y barlo este pasage del libro de Josué c. 2%, y . 2,
 ABR 9) ABR
«Vuestros padres Thare padre de Abraham , y Na ¿ no es una mentira, cuando no se dice na
«chor habitaron á la otra parte del rio y sirvieron l a falso; de lo contrario no seria lícito substraerse
«á dioses ajenos». Mas esta acusacion no puede á las preguntas de una indiscreta curiosidad. Es
caer sino sobre Thare y Nachor. Abraham está muy estraño que Barbeyrac, por otra parte de una
disculpado en el libro de Judith c. 5, y. 6. allí moral tan relajada en orden á la mentira oficiosa,
se dice: «Los Hebreos son un pueblo orijinario de sea tan severo censor de la conducta de Abraham
«la Caldea; han habitado en Mesopotamia, por y de la de los Padres que han querido disculpar
«que no quisieron seguir los dioses de sus padres á este Patriarca.
«que estaban en el pais de los Caldeos. Asi, que Pero ¿no era esponer la honestidad de Sara de
«renunciando á la relijion de sus padres que admi cir en pais estranjero., que era su sobrina ó pa
«tian diversos dioses, adoraron al Dios del cielo rienta, en lugar de decir que era su esposa? Al
«que les mandó abandonar su pais y familia, é ir á menos Abraham no lo pensaba as; antes temia que
«vivir á Charan». Esto no e entenderse mas que si se declaraba el matrimonio, los ejipcios le qui
de Abraham, porque á él es á quien Dios mandó tarian la vida para robar á Sara; en ¿de que
abandonar su pais y familia; , y es probable que diciendo que era, su parienta, esperaba hallar un
su padre Thare que le siguió dejase desde ese mo medio para evadir sus pesquisas. Si se engañaba,
mento de ser idólaíra. La fidelidad de Abraham su error no era un crimen. Dios, conociendo la sa
en no adorar sino al solo Dios del cielo puede ser na intencion de los dos esposos, no permitió que el
una de las razones por las cuales Dios le escojio rey de Ejipto ni el de Gerara atentasen á la cas -
para ser el orijen de su pueblo. tidad de Sara. Los críticos temerarios que han te
En diversos lugares de la Escritura se llama á nido la audacia de afirmar que Abraham habia pros
Dios el Dios de Abraham; los autores sagrados han tituido á su esposa para ser él mejor tratado le han
querido designar con esto que Dios, abandonaba á calumniado por pura malignidad.
los otros hombres para protejerá Abraham única Parece que San Juan Crisóstomo elojia á Sara
mente; quél es acaso un Dios local, cuya providencia por haber espuesto voluntariamente su castidad, pa—
no se estiende sino sobre una familia? No por cierto. ra conservar la vida de su esposo, y aprueba que
Eso significa únicamente que el verdadero Dios, solo este hubiese tambien consentido. Supone que am
era adorado por este Patriarca, mientras que la ma bos esposos han obrado, con la intencion mas pu
yor parte de los pueblos ya formados ofrecian sus ra, y en la confianza, de que el Señor, cuya pro
inciensos á dioses imajinarios. Cuando un cristia teccion habian tan frecuentemente esperimentado,
no dice al Señor: vos sois mi Dios, sabe tambien los socorreria en circunstancias tan peligrosas. Luego
que Dios es el criador, el padre y el bienhechor de no hay motivo para la censura amarga que Barbey
los demas hombres. rac ha lanzado contra este Padre.
Parece al pronto que Abraham se hizo culpable de Sara, estéril y avanzada en edad, invita á su es
mentira al decir al rey de Ejipto y al de Gerara poso para que se junte con su sierva Agar, y que
que Sara era su hermana, siendo asi que era su con ella tenga hijos. Luego esto no fué un crimen.
esposa. Esta sospecha queda desvanecida al obser— En el estado de s familias aisladas y errantes co
var que el mismo término designaba en hebreo una mo estaban entonces, la poligamia no era prohibi
hermana ó una parienta próxima que una nieta ó da por derecho natural. Los Padres de la lglesia
una prima. Los Hebreos no tienen como nosotros no se han engañado, cuando sostuvieron que Abra
términos propios para indicar los diversos grados ham no habia pecado en esto contra la ley natu—
de parentesco. V. HERMANo y HERMANA. ral, y mucho menos contra la ley positiva que to
Algunos intérpretes han creido que Sara, esposa davia no existía. No vemos sobre qué se han fun
de Abraham, era verdaderamente su hermana, hija dado muchos críticos modernos para decidir que
de un mismo padre, pero no de una misma madre; Agar no era mujer lejítima de Abraham ; probare
esto no es probable. En el tiempo en que vivia Abra mos lo contrario en la palabra PoliGAMIA.
ham semejantes matrimonios eran juzgados incestuo En vano hace notar Barbeyrac que Abraham por
sos; no podian ser disculpados por la necesidad, esta conducta, parecia dudar ó ¿ de las
porque el género humano estaba ya suficientemente promesas que Dios le habia hecho de una poste
multiplicado. Por otra parte la conducta de Abra ridad numerosa. Esta objecion es injusta, porque
han, que para ocultar su matrimonio con Sara la lla Dios al hacerle estas promesas en los cap. 12 y 15
m a su hermana, parece probar que los pueblos con del Génesis, estuvo muy lejos de decirle que esta
quienes vivia no creian que un hermano pudiese ca posteridad nacería precisamente de Sara y no de
sarse con su hermana. Asi nosotros pensamos que Sa otra mujer. Dios, no se esplicó sobre este punto si—
ra era sobrina de Abraham. Pudo decir sin embargo no trece años despues del nacimiento dé Ismael.
que era hija de su padre, puesto que era su nieta. Hay Génes, cap. 17. y. 16 y 25.
sobre esta materia una disertacion en las memorias Habia nacido este niño de Agar, cuando Sara lle
de Trevour, junio año de 1710. pag. 1053. gó á ser fecunda y dió á luz á, Isaac; bien pron
Barbeyrac sostiene que el discurso de Abraham to la desobediencia de Agar y el caracter feroz de
era al menos un equívoco equivalente á una men Ismael inspiraron temor á Para por los dias de su
tira, porque este Patriarca le usó para engañará hijo Isaac. -

los Ejipcios, y ocultarles que Sara era su espo-; Exijió pues que madre é hijo se alejasen de la ca
sa. A esto se responde que callar la verdad ú ocul sa paterna, y Abraham consintió en ello. Este proce
tarla á jentes que ningun derecho tienen para pre dimiento ha parecido duro é injusto á los que no han
 ABlt 10) ABR
examinado las circunstancias y pesado el valor de las hombres que creyesen en él y que llegasen por este
palabras. Se dice que Abraham dió pan y agua á los medio áser hijos de Abraham, imitando su fé. S. Pablo
dos desterrados; Gén. c. 21, y . 14. Pues, en el es ue las esplica de este modo, Gálat c. 3 y 4. no ha
tilo de la Escritura, el pan significa el alimento, la lio el sentido místico y alegórico como lo pretenden
substancia, las cosas necesarias para la vida, y aun algunos críticos, sino el sentido literal y natural. Asi
en nuestra lengua , cuando un hombre sin fortuna es que los judios, que toman estas promesas en un sen
dice á su protector dadme pan, quiere decir, procu— lido grosero y las restringen á su sola nacion, estan
radme una decente subsistencia. Por otra parte, Abra en el error.
ham en eslas circunstancias obedecia la orden de Diós, “Segun el y. 15, del cap. 13. del Gén. Dios dijo á
mas bien que el deseo de Sara, y Dios le habia prome Abraham Os daréá vosotros y á vuestra posteridad to
tido protejer á Agar y á su hijo Gén. c. 21, y. 12 y do el pais que veis. Esto ocasionó por partede los incré
13. Tampoco vemos ninguna enemistad entre Ismaelé dulos una objecion, á saber, que Abraham no habien
Isaac, ni antes ni despues de la muerte de Abraham, do poseido nunca en el pais de Canaan, mas que un
ni division alguna entre sus descendientes. campo y una caverna que le habian costado cuatro
Para formar un juicio sensato de la conducta de los cientos siclos, la promesa que el Señor hizo á este
Patriarcas, es preciso colocarse en las mismas cir— Patriarca quedaba nula. Respóndese á esta objecion
cunstancias, y ponerse en el tono de las costumbres que la particula hebráica Bau, que se traduce por ET
y de los usos que reinaban en las primeras edades del que el versículo dicho arriba, tiene otras muchas sig
mundo. -
nificaciones, entre ellas la de id est en latin ó es decir
Isaac tenia cerca de veinte y cinco años cuando en español, como lo prueban muchos pasajes del Gé
Dios para probar á Abraham, le mandó inmolarle en nesis (c. 2, y . 3, bendijo Dios el séptimo dia, vAu,
sacrificio. Al pronto parece que esta órden es indigna es decir le santificó,) del Exodo, de los números,
de Dios; pero el Supremo árbitro de la vida y de la de los jueces y de los Reyes. El sentido del versículo
muerte puede abreviar ó prolongar nuestros dias se— arriba puesto, es pues que Dios prometió la tierra de
gun le agrade; si por un accidente ó por una enfer— Canaan á Abraham, es decir, á su posteridad).
medad, hubiere cortado la vida de Isaac, Abraham
tendria derecho á murmurarle? Es verdad que un sa Abra Imam lenos, V. SAMosATIENos.
crificio de sangre humana hubiera sido un ejemplo Abrahansmitas. Monjes católicos que sufrieron
muy perjudicial, y por eso Dios no permitió que se el martirio por el culto de las imájenes bajo Teófilo
cumpliera; se contentó con la pronta obediencia de en el siglo nono. V. IcoNocLASTAs.
Abraham y le duplicó sus beneficios en recompensa.
Se dirá que Dios, que conoce el fondo de los cora * ABRAHAMITAs. Nueva secta establecida en
zones, que prevee nuestros sentimientos futuros con Pardubitz, en Bohemia, y cuyos miembros, restos de
la misma certidumbre que ve nuestras disposiciones los antiguos Husitas, fueron llamados Abrahamitas
presentes, no tenia necesidad de esperimentar á por su doctrina, y Adamitas, véase esla palabra,
Abraham. Es verdad; pero Abraham tenia necesidad por su conducta real ó supuesta.
de ser probado, y el género humano necesitaba tam— Decian pertenecer á la relijion que profesaba Abra
bien de este ejemplo para concebir que Dios tiene de ham antes de la circuncision; rechazaban esta prácti
recho de exijir de nosotros cuando le parece sacrifi ca, aunque muchos de ellos estaban circuncidados,
cios heróicos, porque es bastante poderoso para re— por haber nacido judios: los demas habian sido pro
compensarlos. iestantes, y quizá algunos de ellos católicos. Su pro
Con razon pues elojian los escritores sagrados la fé fesion de fé no era mas que una variedad del deismo.
y el valor de Abraham , y le proponen por nuestro Creian en Dios, en la inmortalidad del alma, en las
modelo; creyó él, dice S. Pablo, que pudiendo Dios nas y recompensas de la vida futura; pero negaban
resucitar los muertos, haria un milagro, mas bien quc a diviña legacion de Moises, y no admitian de la Es
faltar á sus promesas. Heb., c. 11, y. 19. critura Santa mas que el decálogo, la oracion domi
Cuando Dios dijo á Abraham todas las naciones del nical, rebatian la doctrina del pecado orijinal, de la
mundo serán benditas en tu descendencia, Gén., c. redencion, el bautismo, la Trinidad, la Encarnacion
22, 26 y 28. sostenemos con S. Pablo, Gálat. 3. del hijo de Dios, no concediendo á Jesucristo mas que
y. 16, y con los Padres de la Iglesia, que la pala la humanidad y el caracter de un sabio. Cuando el
bra descendencia designa un solo descendiente de edicto de tolerancia de José II apareció, se les permi
Abraham, que es Jesucristo, como en la prediccion tió incorporarse á una de las relijiones toleradas en
hecha á la serpiente, Gén. c. 3., y . 15. La descen— el imperio, sopena de deportacion; su desprecio les
dencia de la mujer te aplastará la cabeza. valió el destierro; y la vuelta á Bohemia no fue con
Pero eñ qué consiste esta bendicion? Si no se tra cedida mas que á los que abjurando ó finjiendo abju
tase mas que de beneficios temporales y de una pro rar su relijion, se habían hecho católicos.
teccion particular de Dios respecto á los descendien En cuanto á sus costumbres, pasa por constante
tes de Abraham, en qué sentido podria alcanzar es que el pudor y el nudo conyugal no eran nada para
ta bendicion á todas las naciones de la tierra? La pros ellos. La mezcla de los consorcios daba la vida á mu
peridad de los judios nada podia influir sobre la de los chos niños que los padres embrutecidos criaban, no
demas pueblos. Es pues evidente que Dios promete en como siendoles propios sino como seres cuya debili
este lugar y en otros, con las mismas palabras, las dad pedia socorros.
gracias de salvacion ó las bendiciones espirituales,
que queria derramar por el Mesias sobre todos los Absolucion. Remision de los pecados hecha
 ABS ABS
11)
por el sacerdote á nombre de Jesucristo en el Sa En el mismo sentido, algunas proposiciones enun
cramento de la penitencia. V. PENITENCIA. ciadas en términos absolutos, no son ciertas sino por
comparacion ó en un sentido relativo. Cuando se di
Absolucion. Se toma tambien por el acto de le ce que Dios abandona á los pecadores, esta proposi
vantar las censuras y reconciliar con la Iglesia á un cion no es verdadera en sentido absoluto, porque á
escomulgado; en este sentido pertenece mas bien al ninguno deja Dios de dispensar sus gracias; pero no
derecho canónico que á la teología. les concede tantas como á los justos. V. GRACIA,
Finalmente se llama absolucion una oracion que se S. 3. S. Pablo repite lo que dijo Dios por un profeta.
dice al fin de cada nocturno del oficio divino y al fin Yo amé á Jacob y aborrecí á Esaú. Sin embargo Dios
de las horas canónicas, como tambien otra que se ha no ha cesado de derramar sus beneficios sobre Esaú
ce por los muertos. y su posteridad; pero no los ha tratado tan favorable
mente como á Jacob y sus descendientes. El autor
Absolucion general. Ceremonia que se prac. del libro de la Sabiduria dice á Dios: no aborreccis, Se
lica en la Iglesia romana el jueves de la Semana San ñor, nada, nada de lo que habeis hecho. Esta proposi
la, para representar la absolucion que se daba el cion es absolutamente cierta, mas la anterior no lo es
mismo dia á los penitentes de la primitiva Iglesia. sino por comparacion. . . .
La costumbre de la de Roma y de la mayor parte Es menester tambien distingir los argumentos ab—
de las de Occidente era dar la absolucion á los peni solutos de los relativos ó personales, que llaman ar—
tentes el dia de Jueves Santo, llamado por esta razon gumentos ad hominem: estos no son solidos sino con
jueves absoluto. -
relacion á las opiniones y principios del adversario
En la Iglesia de España y en la de Milán esta ab con quien se disputa, y nada prueban contra los que
solucion pública se daba el Viernes Santo, y en el tienen principios y opiniones contrarias;
Oriente el mismo dia ó sábado siguiente, víspera de 2.° Absoluto se dice con oposicion á lo que es con
la Pascua de Resurreccion. En los primeros tiempos dicional, asi es que en Dios se distingue la voluntad
daba el obispo la absolucion y entonces era una par— absoluta, por la que obra inmediatamente por sí mis
le esencial del Sacramento de la penitencia, como mo todo lo que quiere; y la voluntad condicional, por
que era consiguiente á la confesion de los pecados la la que nos deja la libertad de resistir. Dios quiere
reparacion de los desórdenes anteriores y ecsamen de nuestra salvacion, no absolutamente sino bajo la con
la vida presente. «El Jueves Santo, dice Mr. el abad dicion de que nosotros mismos la queramos y obe
*Fleury, los penitentes se presentaban en la puerta zcamos á sus gracias.
«de la Iglesia, y el obispo, despues de haber diriji deº
Se ¿ la imposibilidad absoluta 6 meta
*do al cielo muchas súplicas por ellos, los hacia en física de la imposibilidad moral, que solo significa
ºtrar á peticion del arcediano que le manifestaba una gran dificultad. . -

*ser aquel un tiempo propio para usar de clemencia. 4.º Absoluto se toma en un sentido opuesto á lo
* El obispo les dirigia una exhortacion acerca de la declarativo. De este modo sostienen los católicos que
ºmisericordia de Dios y el cambio que debia apare el sacerdote tiene el poder de perdonar absolutamente
*cer en sus costumbres, obligándoles á lavarse las los pecados, y los protestantes al contrario quieren
“manos en señal de esta promesa: y en fin arrodilla que solo pueda declarar que están perdonados por
“dos á las oraciones de la Iglesia y persuadido el 0S.
*obispo de su conversion les daba la absolucion solem
«ne.» Costumbres de los cristianos tít. 25.
D. Se llama el jueves de la Semana Santa jueves
absoluto, porque en muchas Iglesias se da la absolu
A pesente no existe sino una ceremonia que se cion antes de la ceremonia de la cena: esto es un res
practica por un simple sacerdote, el cual reza los siete lo de antigua disciplina, 6 del uso de , reconciliar
salmos penitenciales y algunas oraciones relativas al en este dia los penitentes públicos, antes de admitir
arrepentimiento que los fieles deben tener de sus pe los á la comunion.
cados. Despues el sacerdote pronuncia las fórmulas
Misereatur et Indulgentiam, las que segun los teólogos Abstemio, del latin abstemius. Se llama de
no obran ó causan la remision de los pecados, por lo este modo á las persouas que tienen una repug
que se diferencia la absolucion general, de que se tra nancia natural al vino y no pueden beberlo. Los
la, de la absolucion propiamente dicha. calvinistas sostenian por una parte con el mayor em
peño que la comunion bajo las dos especies es de pre
Absoluto adj.: Absolutamente, adv. Ab cepto divino, y por otra decidieron en el síno
soluto se dice 1.° por oposicion á lo que es relativo. do de Charenton que los abstemios podian ser ad
Nosotros sostenemos que no hay en el mundo mal al mitidos á la comunion con tal de que tocasen so
guno absoluto, sino solamente males relativos. La lamente con los labios el caliz, aunque no bebiesen
condicion de las criaturas no es buena ó mala, no una sola gota de vino. Los luteranos les vitupe
es un bien ó mal sino por comparacion. El bien raron esta tolerancia como una precaricacion sa
absoluto, es lo infinito; el mal absoluto es la nada: en crílega. -

tre estos dos estremos hay una infinidad de grados ó

De esta disension han convenido en que la co
maneras de ser que se tienen por un mal en compa munion bajo dos especies no es de precepto divi
racion á un gran bien, y se tendrán por un bien si se no, puesto que había algunos casos en que se po
comparan con un mal. El olvido de estos principios dia dispensar. V. comUNION Bajo las Dos Especies,
redujo á mayor oscuridad la cuestion del origen del CALlZ.
mal. V. BIEN Y MAL. Alestimeneia. El motivo general de la abstinen
 ABJ í2 ABJ

cia es el de mortificar los sentidos y dominar las clase de alimentos, en ciertos dias y tiempos? Es
pasiones, Bien conocidas son las concecuencias na cosa singular que los maniqueos que ridiculizaban
iurales de la gula. Segun, Buffon la mortificacion las abstinencias prescritas por Moises ordenaban
mas eficaz contra la lujuria es la abstinencia y el ellos mismos á sus escogidos ó predestinados se abs
ayuno. Hit. Nat., tom. 3, en 12.° cap. 4. 105. tuvieran del vino y carne de los animales. Para
Despues de haber criado Dios á nuestros primeros justificar esta disciplina, decian que entre los ca
padres les señaló para su alimento las plantas y los tólicos, los que obraban de este modo eran teni
frutos de la tierra, sin hablarles de la carne de los ani dos por los mas perfectos. San Agustin le responde
males. Gén. c. 1. y. 29. Mas habiendo visto los es que estos practican la abstinencia para mortificar
cesos á que se habian entregado los hombres an sus pasiones, en vez de que los maniqueos creian
tes del diluvio, no parece probable se abstuvie que la carne era de suyo impura, como obra que
sen de ningun género de alimentos que les agra era del principio malo. Beau sobre que desea con
dasen. Despues del diluvio pernitio Dios á Noé el mayor empeño disculpar á los maniqueos, pa
y á sus hijos que comiesen la carne de los ani sa en silencio la contradiccion en que han incur
males prohibiéndoles al propio tiempo , comer su rido acerca de las abstinencias judáicas, y sostiene
sangre. Gén. c. 9. y 3. y sig. Por los térmi que ellos raciocinan con mas consecuencia que los
nos en que está concebida esta prohibicion se in católicos, y abusa de un término equívoco llaman—
fiere ser la causa el inspirar á los hombres cier do alimento sano á lo que no está infestado ni
to horror al asesinato. La costumbre de degollar á corrompido y que por lo tanto no daña á la sa
los animales y beber su sangre conduce infalible lud. ¿Es pues lo mismo una cosa que otra? Con se—
mente al hombre á ser cruel. Moises prohibió en mejantes sofismas se puede probar todo lo que se
sus leyes á los judíos comer la carne de los ani quiera. Hist. de los maniq., lib. 9 c. 11. Luego
males llamados por él impuros, y escluye por sus cuando la Iglesia nos ha encomendado la absti—
nombres á todos aquellos cuya carne podia ser da nencia y el ayuno no se ha propuesto mas objeto
ñosa relativamente al clima, y causar varias en que la mortificacion, ni se ha fundado en las pro
fermedades. Algunos filósofos han atribuido á la hibiciones hechas á los judios, ni en los delirios
misma causa la costumbre que tienen los egipcios de algunos herejes; y mitiga la severidad de sus
de abstenerse de la carne de muchos animales. El leyes, siempre que se presentan razones suficien.
uso del vino estaba prohibido á los sacerdotes du. tes para poder usar de indulgencia. Algunos filó—
rante todo el tiempo que eslaban ocupados en el sofos han convenido que en buena política es muy
servicio del templo, y á los nazarenos durante su útil suspender la comida de carne de los anima
purificacion. Al principio del cristianismo, los ju les en algunos dias y semanas del año. Cuanto
díos querian sujetar, á los paganos que se habian á las abstinencias practicadas por algunas sectas
convertido á todas las observancias de la ley ju de filósofos, como por ejemplo, los pitagóricos, or—
dáica, y á todas las abstinencias que los judíos prac ficos, &c. nada nos incumben; los motivos que te
ticaban. Los apóstoles reunidos en Jerusalen deci nemos los cristianos para observar la abstinencia
dieron que bastaba á, los fieles convertidos del nada tienen de comun con los que dirigen la con
paganismo abstenerse de la sangre , de comer la ducta de estos filósofos. Algunos protestantes han
carne de los animales ahogados, de la fornicacion y sostenido que en los primeros siglos de la Iglesia
de la idolatría. Act., c. 15. S. Pablo ha dado en la abstinencia de carñe no hacia parte esencial del
sus cartas sobre este punto varias reglas muy sá ayuno de cuaresma, que solamente se prohibia usar
bias. Pero no pasó largo tiempo sin que la abs un alimento delicado y esquisito, bien fuese grueso
tinencia presentase varios inconvenientes: Tertulia ó de poca sustancia; que nada se habia prescrito
no nos dice que los paganos para probar á los cris— acerca del género de los alimentos con tal que se
tianos les presentaban para comer sangre y man observase cierta sobriedad y mortificacion. El Padre
teca de puerco. Apol. . . c. 9... Mas las abstinencias Tomasino ha hecho ver lo contrario con pruebas
prescritas por Noé á los judíos y á los primeros sólidas. Tratado de los ayunos 1.° part. 10 y 11;
y en la 2.° part. c. 3." &c.; y asi como no habia ley
fieles demuestran el abuso que los protestantes han
hecho de la sentencia del Evangelio, Que no es lo
alguna positiva y formal respecto al ayuno, tampo—
que entra por la boca del hombre lo que le man co la habia tocante á la abstinencia y que en todos
eha. Mateo, c. 4. y. 11. Los maniqueos presen tiempos nos hemos de atener á lo que en un prin—
taron anteriormeute esta misma objecion para pro cipio se habia establecido. Asi es, que Orjenes ase
bar que las abstinencias prescritas por Moises eran gura haberse abstenido de la carne y vino muchos
absurdas, y S. Agustin ha refutado mas de una cristianos fervorosos en el siglo tercero, no por las ra
vez este sofisma. Libro contra Adim capt. 15. n. 1. zones arriba indicadas, sino para sujetar su cuerpo
libro 16. contra Faus., c. 6 y 31. . . ¿Es por ven á la esclavitud y reprimir las pasiones. Libro 5, con
tura permitido comer carne humana bajo el pretes tra Celso, n. 9, y homil. 19 sobre Jerem. n. 7 y ve
to de que ningun alimento mancha al hombre? La mos el mismo espíritu en el cánon 51 de los apósto
manzana comida por Adan le manchó sin duda, pues les. Con mayor razon, los cristianos pues debemos
practicar esta mortificacion, con especialidad en los
que fué castigado como tambien toda su posteridad.
dias de ayuno. Aun cuando esta costumbre no se hu
Desde que los apóstoles tuvieron autoridad para pro
biera establecido desde el principio entre los Orienta
hibir á los cristianos el uso de beber la sangre y
comer la carne de los animales ahogados ¿por qué les, habria sido necesario introducirla á medida que el
no la han de tener para prohibir el uso ¿ toda cristianismo se propagaba en nuestros climas septen
-
 ABS 13 A8S
trionales. En estas regiones han sido siempre las ¿? en abstenerse de él. San Gerónimo ataca estas
carnes los alimentos mas delicados y jugosos, por s consecuencias, una despues de otra, y este es
cuya razon son preferidos, como tambien por ad el sentido de su respuesta. Vuestro raciocinio es
mitir mas variaciones en sus aderezos; asi, su pri defectuoso por tres razones. 1.° Dios ha permitido
vacion ha debido ser mas sensible en los dias de or medio de Moisés el divorcio que habia pro
ayuno. Si los pueblos del Norte no hubieran usa - ibido anteriormente; y sin embargo no se sigue
do tan frecuentemente de los alimentos de carne, de aqui que el divorcio sea indiferente en sí mis
no se hubieran resistido tanto en adoptar la moral mo. 2." Aun cuando el uso de la carne fuese in—
de los llamados reformadores, respecto á la absti diferente en sí mismo, bastaria que Jesucristo, que
nencia y ayuno. Barbeyrac, protestante exaltado, re quiso restablecer la perfeccion primitiva nos hu—
prueba el que S. Gerónimo haya condenado abso biese disuadido de este uso, asi como habia prohi
lutamente el uso de comer carne, asegurando ser bido el divorcio, para que nos asbtuviésemos de lo
un acto malo en sí mismo, como lo es el divorcio. uno y de lo otro. 3."Que haya ó no una prohi
»Jesucristo, dice este santo Padre, ha colocado el bicion positiva, S. Pablo dice, Rom., c. 14. y.
»fin de los tiempos bajo la misma base que el prin 21: «Vale mas no comer carne ni beber vino,
»cipio; de modo que en la actualidad no nos es per » y abstenerse de todo lo que pueda hacer caer á
»mitido repudiará una muger, ni hacernos cir » nuestro prógimo, escandalizarle, ó debilitar su fé.»
»cuncidar, ni comer carne, segun dice el Apos— Luego , puede haber escelentes razones para abste
» tol: es bueno no beber vino y no comer carne; pues nerse de aquello que es indiferente en sí mismo, y
» el uso del vino como el de la carne comenzó des aun ser un acto meritorio; asi que vuestro argu
pues del diluvio.» Adv. Jovin. lib. 1. pág. 30. San mento nada prueba. Barbeyrac, que conocia la fuer
Gerónimo, segun Barbeyrac, abusa aqui del pasage za de estas tres reflexiones, las ha confundido y
de san Pablo, y en todo cuanto habla de la abs— lo ha embrollado todo con el objeto de poder de
tinencia y del ayuno no hace mas que copiar á Ter satinar á su antojo.
tuliano que escribia en el mismo sentido que los mon Que se diga sisequiere, que la respuesta de san Ge
tanistas. Tratado de la moral de los Padres. c. 15. rónimo no está enteramente desarrollada, puede con
S. 12, y sig. ¿Es cierto todo esto? cederse; pero no por esto se sigue que sea insufi
En primer lugar, el testo de san Gerónimo no es . ciente, y que es falsa su moral.
tá tomado fielmente ; dice asi: «Pues que Jesucristo No es tampoco mas cierto, que el Santo haya en
» ha colocado el fin de los tiempos bajo la misma ba tendido mal el pasage de S. Pablo, puesto que refiere
» se que el principio, no nos es perinitido repudiar á literalmente las primeras palabras; y dándole el mis
» ninguna muger, ni recibimos la circuncision, ni mo sentido que Barbeyrac, el raciocinio de S. Geró—
» nos alimentamos de carne» san Gerónimo no dice nimo conserva toda su fuerza.
que este último uso no nos es permitido, lo que es En cuarto lugar, ¿qué importa que este Padre haya
esencialmente notable: su intencion evidente es decir copiado á Tertuliano, que seguia la opinion de los
«que no nos alimentanos todos de carne, y en todos montanistas, siendo asi que él no cayó en el mismo
«tiempos.» En segundolugar, este Padre escribia con error? Los raciocinios que Tertuliano hizo despues desu
tra Joviniano, el cual sostenia, como los protestan caida no son todos hérélicos, y un raciocinio mal
tes que no habia mérito alguno, en abstenerse de aplicado no es siempre un error. Hay acerca de la
la carne, porque es un uso indiferente, pues que abstinencia dos escesos que debemos evitar, siguien
Dios, que le habia prohibido antes del diluvio, le do un término medio. El primer esceso es de los he
permitió despues. Asi que, este raciocinio es evi reges encratilas, montanistas, maniqueos, etc. que
dentemente falso. La Escritura aprobó los nazare sostenian que el uso de la carne es impuro, pro
nos que hacian voto de abstenerse del vino y de hibido y malo en sí mismo; por lo que S. Pablo les
no afeitarse la cabeza durante un cierio tiempo. ha combatido en la epist. 1.° á Tim. c. ... y. 3. El
Núm. c. 6. y. 3. Los rechavitas son alabados por segundo es el de Joviniano y de los protestantes que
haber observado la prohibicion que sus padres les ha pretendian que la abstinencia de la carne no tiene
bian impuesto de beber vino, y habitar en sus propias mérito alguno, que es cosa supersticiosa, judáica,
casas. Jerem. c. 35, y. 16. Jesucristo alabó á san absurda, etc. La lglesia católica ha seguido un buen
Juan Bautista que se sostenia con langostas y miel medio, diciendo que esta abstinencia puede ser lau
silvestre. Los apóstoles prohibieron a los primeros dable, meritoria, y aun la recomienda en ciertos ca
fieles el uso de la sangre y de las carnes sofoca sos por escelentes causas. Tal es el espíritu del Ca
das, aunque este uso fuese en sí mismo indiferente. 101 ¿ ó 51, de los apóstoles que dice: «Si un cléri
Es pues un acto meritorio abstenerse de cosas in »go se abstiene del matrimonio, de la carne y vino,
diferentes, cuando el motivo de esta abstinencia es » no por mortificacion sino por horror, y blasfeman
laudable, » do al mismo tiempo contra la creacion, sea corre
En tercer lugar, san Gerónimo no compara el uso »gido ó degradado.» Es pues absurdo alegar al pre
de la carne con el del divorcio, en cuanto á su natu sente, contra la abstinencia practicada por mortifica
raleza y efectos, sino relativamente á la prohibicion cion, lo que los apóstoles y antiguos Padres han di
y permiso de Dios, que era sobre lo que argumen cho contra la de los heleges.
laba Joviniano. Decia este: Dios ha permitido des Si se nos pregunta la razon de ser laudable mor.-
pues del diluvio comer carne, cosa que anterior tificarse con la abstinencia, responderemos con S. Pa
mente habia reprobado; luego este uso es indiferen blo. Gálat, c. 5. y . 2: «Los que estan dedicados
te en sí mismo, y por consiguiente no hay mérito al »á servir á Jesucristo han crucificado su carne con
TOMO l. 8
 ABS 1 A3U

»sus vicios y concupiscencia: 1." Corinth. c. 9. . hombres frecuentemente dominados por estas impe s
º.
»27; Yo castigo mi cuerpo y le reduzco á la esclavi riosas pasiones, que se han persuadido de que obraban l.
»tud, para no ser reprobado despues de haber predi. por motivo de religion, etc.; ved aqui la causa de tan
»cado á los demas.» Como en nuestros dias se ha es tos y enormes abusos. Si queremos buscar la primera tº
tendido la ambicion de reformar todas las leyes, se raiz de todos los abusos, la hallaremos siempre en -º-

ha tratado muy sériamente de suprimir un número las pasiones humanas; sin ellas no hubiera podido rre
considerable de dias de abstinencia y ayuno, porque la obrar la estúpida ignorancia, mas las pasiones tumul u
ley que los ordena, no es respetada, y ha llegado á tuosas sugirieron falsos raciocinios y una falsa ciencia, sis
ser una ocasion contínua de transgresion ; citándose cosas mucho mas terribles que la ignorancia. ri.
con este motivo el pasage de S. Pablo en la Epist, á Asi la codicia por los bienes de este mundo y el temor R

los Rom ; c. 7. y. 10 : «El mandamiento que debia de perderlos hicieron crear una multitud de diosesó R,
» haberme dado la vida, ha servido para darme la genios encargados de distribuirlos, asi como tambien l,
» mtlerle.» el culto insensato que se les ha dado; la vanidad de rra
Si esta razon fuese sólida, no solamente seria ne los impostores les sugirió inventar las fábulas y las sºs
cesario concluir con quitar algunos dias de abstinen prácticas que pretendian se tuviesen por maravillo
cia sino suprimir enteramente toda cualquiera ley sas para engañar á los hombres; el amor impúdico, º
de abstinencia. No se ha tenido pues en cuenta, que elódio, la envidia, la venganza invocaron á las po ts y
San Pablo, hablaba del precepto de la ley natural testades infernales; la curiosidad desenfrenada qui re,
cuando decia: tu no codiciarás, etc. ¿Es necesario so penetrar en el porvenir y forjó el arte de la adivi a
abolir la ley natural porque se quebranta frecuente nacion; tambien fue halagada la molicie con la prác Ris s.
mente? Cuando las costumbres públicas están relaja lica de un culto puramente esterno, etc. ¿Qué reme— Re
das no se respeta ley alguna; entonces es llegado el dio nos ha dado la filosofía?... Ninguno. Lejos de ala es)
caso, no de ¿ las leyes sino de darlas mayor fuer car de frente todos esios abusos, los confirma con su lºs y
za, si se puede. V. CUARESMA, AYUNo. aprobacion y los sostiene por medio de sus sofismas, ar
haciéndolos de este modo mas incurables. La luz del
Abstinentes. Secta de herejes que aparecieron cristianismo hizo desaparecer un número muy consi ºrie:
rar
en las Galias y en España cerca del fin del siglo ter derable de estos abusos; mas no pudo sofocar todas
cero. Se cree que habían tomado una parte de sus opi las pasiones que estaban dispuestas á reproducirlos. lºs a
niones de los gnósticos y maniqueos, pues que prohi Muchas sectas de herejes se obstinaron en consevar e.
bian el matrimonio, condenaban el uso de las carnes una parte de ellos, y los eclécticos del cuarto siglo º ra
y colocaban al Espíritu Santo en el rango de las cria emplearon todos sus esfuerzos para acreditar todas las res
iuras. Parece que Baronio los confunde con los hiera supersticiones del paganismo. En el quinto siglo los sa
citas; mas cuanto se ha escrito sobre este objeto, des bárbaros del Norte nos trajeron los abusos que habian *
pues de s. Filastro, conviene mas bien á los encrati nacido en sus montes y los consagraron muchas ve
ías, cuyo nombre es idéntico á los de abstinentes y con ces con sus leves. La Iglesia no cesó de espedir de—
tinentes. V. ENCRATITAs, HIERACITAs. cretos, y pronunciar anatemas para estirparlos; ¿pero
qué podian alcanzar conlra unos bárbaros las instruc
Abuso en materia de religion. En vir ciones, las leyes, las amenazas y las censuras? Mas
tud de la constitucion moral del hombre, se le ve abu al presente por el contratio, acusan á la misma Igle
sar frecuentemente de la religion, como abusa de las sia algunos falaces raciocinadores, de haber fomen
leyes, de las costumbres, del lenguaje, de la amis lado las supersticiones, en el mero hecho de darlas
tad, del cariño, de los talentos, de las artes, etc. De demasiada importancia. Nos debemos valer, dicen
nada abusaria si estuviera sin pasiones, y si la recla ellos, de la fisica y de la historia natural para ins—
razon fuese siempre la regla de su conducta; mas esta truir á los pueblos; y esta revolucion estaba reserva
perfeccion está fuera del alcance de sus fuerzas. Las da á nuestro siglo, que es el de la filosofía. Nosotros
prácticas del culto primitivo eran puras y sencillas, quisieramos por tanto saber qué progresos ha hecho
el hombre hechopoliteista, se sirvió de ellas para hon la física en los valles de los Pirineos, de las Cevennas,
rará las divinidades imaginarias que se habia forja de los Alpes, de los Vosgos y del Monte-Jura; en las
do: esto fue un abuso y una profanacion. Estas prac campiñas de Berri, de la Bretaña, de Champaña y
ticas eslaban destinadas para escitar en él sentimien Picardia. No son los libros de historia natural los que
tos interiores de respeto, de sumision, reconocimien nuestros filosofos esparcen entre el pueblo, sino los de
to, penitencia y confianza para con Dios. Se persua el ateismo y de la incredulidad. Nosotros, pues, sa
dia que bastaban solamente estos signos, que podian hemos por una larga esperiencia, que la increduli
ser piadosos, agradar á Dios y merecer sus gracias, dad no nos cura ni de las pasiones ni de las supersti
sin ser acompañados de los sentimientos del corazon. cion que es su efecto, y que se puede muy bien creer
Dios no habia prohibido emplear en su culto los sig en la mágia sin creer en Dios. Si el pueblo, una vez
nos de alegria el cántico, la danza, las comidas de rolo el yugo de la religion, pudiese dar libre curso á
fraternidad; el hombre voluptuoso abusó de todo pa sis vicios, ¿seria capaz la filosofía de contenerle?
ra satisfacer su sensualidad. Las señales del arrepen Conce lemos sin dificultad que en cualquier tiempo to
timiento son útiles para humillarnos y correjirnos, y da pasion puede abusar de la religion: asi, se ha abu
sin embargo hay almas tan escrupulosas que pueden sado por orgullo, cuando se ensa zan las gracias de
llevarlas hasta el esceso y hacerlas dañosas. La religion Dios, y se manifiesta cierto odio ó desprecio á aque
está destinada á reprimir el orgullo, el interés, la am llos á quienes el Señor no ha hecho los mismos favo
bicion, la envidia, el odio, y tambien se encuentran res, y este era uno de los defectos de los judios: se
 ACA ºj A CC

abusa por ambicion, cuando bajo el prelesto de celo, partido de los arrianos en tiempo de Valente. No se
se cree suficiente para desempeñar todos los empleos ha podido saber cuál fuese la creencia de los que se
y alcanzar todas las dignidad es de la Iglesia; por ava dejaron conducir por él, y que fueron llamados Aca
ricia, cuando se trafica con las cosas santas, cuando cienses. Depuso de su silla á S. Cirilo de Jerusalen,
se emplean las imposturas y raudespiadosos para ar de quien había recibido las órdenes; tuvo parte, ó
rancar las limosnas de los fieles; por envidia o celo, mas bien intrigó para que fuese desterrado el Papa
cuando no se hace justicia á los talentos, á las virtu Liberio, y en la intrusion del antipapa Feliz, sien
des, á los trabajos y á los felices resultados de un ope de él depuesto á su vez por el concilio de Seleucia en
rario evangélico; por violencia de caracter, cuando 359, y por el de Lampsaca en 365, y murió sin sa
se quisiera hacer caer fuego del cielo sobre los sa herse probablemente ló que él creia ó no creia. Véase
maritanos, ó esterminar á los incrédulos; por pe á Tillemont. Mem., t. 6, p. 30', y siguiente.
reza, cuando por una falsa humildad se rehusa tra Ha habido otros muchos obispos del mismo nom—
bajar para la salvacion de las almas, etc. Mas ¿no hre á los cuales no debemos confundir con este. Acacio
son estas mismas pasiones las que hacen nacer la in de Berea, en Palestina, fue amigo de S. Epifanio, y
credulidad? Se la abraza con orgullo porque esta se hizo respetar largo tiempo por sus virtudes; mas
incredulidad da un realce de espíritu fuerte á los ojos deshonró su ancianidad, colocándose á la cabeza de los
de los ignorantes, por lo cual se precian de pensar perseguidores de S. Jnan Crisóstomo. Acacio obispo
mejor que los demas hombres; por ambicion y codi de Amida, se hizo célehre por su caridad para con los
cia cuando se la considera como un medio de agra— pobres. Acacio de Constantinopla fue uno de los par
dar á los superiores, de acreditarse y alcanzar los tidarios de Eutiques, etc.
honores literarios y las recompensas destinadas á los
talentos; por la lascivia, como medio de seducirá las A caso. V. FortTUNA.
mugeres y librarlas del yugo de la religion; por en—
vidia contra el clero á causa del crédito y considera Aceidentes eucarísticos. Segun la creen
cion de que goza; por ira, cuando se declama y se cia católica, despues de las palabras de la consagra—
dirigen invectivas contra él, sin guardarle ningun de cion, la sustancia de pan y vino queda destruida, y
coro; por molicie á causa de sernos incómodas las se convierte en el cuerpo y sangre de Jesucristo; mas
prácticas de religion, etc. ¿De qué sirven, pues, las cualidades sensibles del pan y del vino, el láma
á los incrédulos sus disertaciones contínuas acerca de ño, el color, el gusto, etc., permanecen: estas cua
los abusos en materia de religion? Mientras existan lidades sensibles son llamadas por los teólogos, acci
los hombres habrá vicios, vitia erunt donec homines; dentes, especies, apariencias.
y no es capaz la incredulidad de sanar las imperfec Como la sustancia del cuerpo abstraida ó separada
ciones de la humanidad. ¿Pero qué medio se podria por nuestro entendimiento de las cualidades sensibles,
adoptar para prevenir todos los abusos? las leyes, las no es una idea clara, los accidentes separados de la
prohibiciones, las amenazas, y las penas son frecuen— sustancia no nos representan una idea muy esacta:
temente inútiles; el hombre dominado por las pasio es pues inutil arguir contra este dogma de fe, valién
nes las esquiva ó las desprecia. La lglesia que no pue donos de los conocimientos filosóficos. Si el miste—
de imponer otras penas que las espirituales, que te rio de la Eucaristia pudiera comprenderse claramen
me agriar el mal con remedios violentos, gime, exhor— te, no seria un misterio. V. EUCARIsTIA.
ta, instruye, se limita á reprender y amenazar y to— o Sº Para prevenir ciertas cavilosas objeciones
lera aquellos abusos que no puede ni impedir ni re contra el augusto misterio de la Eucaristia, y como
formar. La esperiencia de los males causados por las propia esplicacion de esta materia, téngase pre
reformas imprudentes, la resistencia que frecuente sente la doctrina de S. Alfonso Ligorio. «Aun—
mente ha encontrado por parte de aquellos que estaban que Dios no pueda destruir la esencia, puede sin
interesados en perpetuar los abusos, la envidia y las embargo privarla de sus propiedades: no puede
alarmas que producen casi siempre el uso de la au quitar al fuego la esencia de , fuego; pero está
toridad, la detienen é impiden usar de rigor. Los que en su poder el quitarle la propiedad de quemar, co—
la critican serán quizá los primeros que sostengan los mo sucedió en la persona de Daniel y de sus com
abusos que ella quisiera corregir, abusando ellos nis— pañeros, que arrojados al horno quedaron ilesos.
mos de la sencillez de los hombres, engañados las mas Asi, aunque Dios no pueda hacer que exisla un cuer
veces por este celo hipócrita. po sin esiension y sin la cantidad que le es propia,
uede hacer no obstante que este cuerpo no ocupe
Aeacienses. Acacio, llamado el Tuerto, fue ugar, y que se halle todo entero en cada parte de
discípulo y sucesor de Eusebio en la silla de Cesarea, las especies sensibles que le contienen á la manera
y tuvo como él una gran parte en las turbilencias del de las sustancias. Lo mismo pues que la sustancia
arrianismo. Era erudito y elocuente, pero muy am del pan y del vino existian antes bajo sus propias
bicioso; y este vicio le ¿ hacer un uso muy malo especies sin ocupar lugar, y toda entera en cada
de sus talentos. Se le consideraba como uno de estos parte de las especies; asi tambien el cuerpo de Cris
hombres inquietos, intrigantes y ardientes, que se io, en el cual se convirtió la sustancia del pan, no
mezclan en todos los negocios, queriendo alcanzar ocupa lugar, y se halla todo entero, en cada parte de
crédito á cualquier precio, que no tienen mas reli las especies». Hé aqui, como se esplica Sto. Tomás»:
gion que la que pueda servirá sus intereses. Acacio »Toda la sustancia del cuerpo de Cristo se contiene
fue arriano temerario bajo el emperador Constancio; » en este sacramento despues de la consagracion, co
se hizo católico bajo Joviniano, y volvió á entrar en el » mo antes de ella se contenia alli toda la sustancia
 ACE 16) ACE
» del pan». 3. p. q. 76. art. I. Y añade: La propia » con aceite vuestra cabeza». Se conoce que el autor
» totalidad de la sustancia se contiene indiferentemen
no pretendió dar por medio de estas palabras un pre
»te en pequeña ó grande cantidad, de donde se si cepto de curiosidad y magnificencia sino recomendar
»gue que toda la sustancia del cuerpo y sangre de la pureza del alma y la aplicacion contínua á dar buen
Cristo se contiene en este sacramento. 3. p. q. 76. ejemplo.
art, I. ad. 3. Véase la obra de dicho santo titulada: Derramar perfumes sobre alguna persona era una
El triunfo de la Iglesia, ó refutacion de las heregias, distincion de honor y respeto; por lo que se daba á los
ADisertacion décima. convidados á comer con la misma familia; se prodi
gaban los perfumes para con los superiores ó perso
Acéfalos, sin cabeza. La historia eclesiástica nas de alto rango, y por consiguiente una uncion de
hace mencion de muchas sectas llamadas Acéfalos. De aceite perfumado se juzgaba que constituia sagrada á
este número son, 1.º, los que no querian adherirse una persona. Esta accion, pues, llegó á ser natu
ni á Juan, patriarca de Antioquia, ni á S. Cirilo de ralmente un símbolo de consagracion, aun entre las
Alejandria, cuando fue condenado Nestorio en el cosas inanimadas. Jacob, para consagrar una piedra
concilio de Efeso. 2.° Ciertos herejes del quinto siglo y hacer un altar, derramó aceite, Gén., c. 28, y. 18;
º siguieron los errores de Pedro Mongo, obispo c. 33, y . 1' .
e Alejandria, y le abandonaron despues porque fin Minucio Feliar, c. 3, y Arnobio, lib. 1.º, nos ha—
jió suscribir á la decision del concilio de Calcedonia; cen ver que se practicaba la misma ceremonia entre
estos eran seclarios de Eutiques. V. EUTiquANos. los pagaños; mas no se sigue de aqui, que estos últi
3." Los partidarios de Severo, de Antioquia, imos, habiendo tenido conocimiento de la accion de Ja
y todos los que rehusaban admitir el concilio de Cal— cob, quisieran imitarle; un símbolo natural, y que
cedonia; estos eran tambien Eutiquianos. Se ha lla por sí mismo se representa al entendimiento humano,
mado tambien Acéfalos á los sacerdotes que se sepa— ha podido efectuarse entre todas las naciones, en la
raban de la jurisdiccion desu obispo, á los obispos que verdadera, como en las falsas religiones, sin que las
rehusaban someterse á la de su metropolitano, á los mes lo hayan tomado de las otras.
cabildos y á los monasterios que pretendian ser in Asi en el estilo ó lenguaje de la Sagrada Escritura
dependientes de la jurisdiccion de los ordinarios. Este una persona ungida es una persona sagrada; aceite ha
punto de disciplina pertenece á los canonistas. significado la incion misma y la persona que la re
cibia, un rey, un sacerdote, un profeta. Isaias, c.
Aceite. En la Escritura Santa se toma este 10, y, 27, dice «que el yugo de lsrael se quebranta
nombre frecuentemente en un sentido figurado; como ria á vista del aceite»; es decir, por la presencia de
aceite sirve de alimento, entra tambien en el número un personaje sagrado. El parafrasto caldeo aplica es—
de los perfumes, se emplea como remedio, se derra— tas palabras al Mesias, cuyo nombre significa ungido
ma con suavidad, penetra los cuerpos sólidos, y sirve ó sagrado. En Zacarias cap., y. 14, duo filii olei
para dar luz y calor; estas diferentes propiedades han son dos sacerdotes ó dos profetas,
dado ocasion á varias metáforas. El aceite ha sido 3.º. En todos tiempos se ha usado el aceite para
considerado como un símbolo de la gracia divina, que sanar las llagas: el bálsamo del samaritano es bien
se insinua dulcemente en nuestra alma, la regocija conocido; porio que Isaias hablando de los vicios de
y consuela, cura sus enfermedades, la fortifica, la los israelitas, c. 1, }. 6, dice que la llaga de Israel
ilumina, y hace brillar por medio de la virtud. 1.° El no habia sido frotadada con aceite y por tacto no habia
aceite ha servido para designar la fertilidad y la sido curada. Los discípulos de Jesucristo untaban con
abundancia. En Isaias c. 5, y. 1. cornu filius olei sig aceite á los enfermos y los curaban, Marc. c. 6, y. 13;
nifica una colina de tierra gruesa y fértil; en el sen en cuyo caso no era la virtud natural del aceite la que
tido figurado, se toma por abundancia de los dones producia este efecto, sino que intervenia el poder di—
de Dios; salm. 22, }. 5. «Wos habeis llenado mi ca vino de Jesucristo.
beza de aceite» es decir, vos me habeis colmado de ...” El candelero del tabernáculo y del templo
beneficios; salm. , , y . 8. Oleum latitiae es la abun estaba adornado de siete lámparas en que ardia el
dancia de las gracias de Dios y de sus dones sobre aceite, Earod., c. 25, y, 6. Jesucristo en la parábo
naturales. Cuando el Salmista dice en el salmo 10, la de las diez vírgenes, designa á las virtudes y bue—
y. 5. El aceite del pecador no engrasa mi cabeza, da á nas obras por el aceite de una lámpara., Mat., c. 25,
entender que no quiere tener parte alguna en los bie y., 3 y ... en el Apocalisis, cap. 11, y., dos can—
nes, en la propiedad y en los placeres de los peca deleros, provistos de aceite, representaban dos perso
dores. najes recomendables por el esplendor de sus virtudes.
2." Como los orientales han usado tanto de las 5." La facilidad con que el aceite se estiende y
esencias y aceites odoríferos, earilarare faciem in oleo, forma manchas, ha dado ocasion al salmista á decir
salm. 103, y. 15, significa perfumarse el rostro. En de un pecador, que la maldicion penetrará como el
las fiestas de alegria y otras de este género se peuma aceite hasta la médula de sus huesos. salm. 108,
ban de pies á cabeza; en el duelo y en la tristeza, se y. 18, etc.
abstenian de este uso: por lo que Isaias dijo en el El sentido de estas comparaciones y metáforas se
cap. 61, y.3, oleum gaudii pro luctu, para espresar aplicaba mas convenientemente entre los orientales
la alegria que sobreviene á la tristeza, significando la que entre nosotros, porque ellos hacian del aceite un
alegria siempre por el esmero en perfumarse. En el uso mas variado que nosotros, que le suplimos con
Eclesiastés, c. 9, y.8, se dice: «Que vuestros vesti manteca, cera y el sebo de los animales. Por la
» dos esten siempre blancos, y no omitais perfumar misma razon, para comprender la energia de la ma—
 ACE 17) ACE
yor parte de las ceremonias de la religion, es preci lo de la gracia de Jesucristo que os ha sido comunica
so conocer las costumbres antiguas, y en especial las da.... Por la oracion é invocacion de Dios, este aceite
del Oriente. V. UNcioN, PERFUME. adquiere la virtud de purificar vuestras almas de las
ACEITE DE UNCION. Perfume que habia com manchas del pecado, y de lanzar los demonios.» San
puesto Moises pará consagrar á los reyes y pontífi Ambrosio y S. Juan Crisóstomo dicen que esta un
ces; vasos é instrumentos del culto divino, de que se cion es como la de los atlelas que se preparaban al
servian los judios para el labernáculo y el templo. Se combate.
dice en el Earodo, c. 30, y.23, que este perfume esta Bingham y Daillé han afectado observar que no se
ba compuesto de mirto, de cinamomo, de calamus habla de esta uncion sino en los escritos del cuarto
aromáticus y aceite de olivo, mezclado todo segun siglo, y que por consiguiente no se usaba en los tres
el arte de los perfumistas. Dios añade, que todo el siglos precedentes. Nosotros mas bien informados po—
ue hubiere sido ungido con este aceite, será sagra demos asegurar lo contrario. Los obispos del cuarto
o, y que todo el que le tocase seria santificado. y. siglo no se han atribuido sin necesidad la autoridad
29. Fue ordenado á los israelitas guardasen con mu— de instituir nuevas ceremonias para la administracion
cho esmero este aceite para los siglos futuros, siendo de los sacramentos; y solamente han practicado y en—
por consiguiente depositado en el santuario; pero señado á los fieles lo que habia sido instituido en
se prohibió á toda persona particular, bajo pena de tiempo de los apóstoles. Si la uncion de los catecú
muerte, hacer semejante perfume, y emplearle en menos hubiera sido en el cuarto siglo una institu
ningun uso profano. y.32. Todos los reyes no reci cion nueva, ¿se habria usado en la lglesia de Jerusa
bian esta uncion sino solamente el primero de una len, en la de Constantinopa y, en la de Milan? Nin
familia que subia al trono, quedando consagrados en guna Iglesia particular se ha abrogado el derecho sin
su persona todos los sucesores de su estirpe. Estos un justo motivo de cambiar ó introducir un rito sa—
últimos eran tambien llamados ungidos del Señor, por cramental; las demas Iglesias no lo hubieran adop
que las voces uncion y dignidad real eran tenidas tado. Ninguno de los Padres de los tres primeros si
or sinónimas. Pero cada soberano sacrificador reci— glos ha descrito las ceremonias cristianas; al con
ia la uncion antes de entrar en el ejercicio de sus trario se ocultaban cuidadosamente á los paganos.
funciones, y lo mismo se observaba con el sacerdote El silencio pues de los escritores anteriores al cuarto
que marchaba á ocupar su puesto en la guerra. siglo nada prueba.
Los vasos é instrumentos que estaban consagra Mas tales la manía de los críticos protestantes que
dos con el aceite de uncion eran el arca de la alianza, cuando ellos pueden sospechar que la Iglesia católica
el altar de los perfumes, la mesa para los panes de ha desechado ó cambiado alguno de los antiguos ri
la proposicion, el candelero de oro, el altar de los tos, hacen de esta accion un crimen, y siempre supo—
holocaustos, el lavatorio y los vasos y vasijas corres— nen que lo ha hecho sin suficiente causa; ellos mis
pondientes. Cuando se destruia alguno de estos ins mos han suprimido por capricho y sin motivo alguno
trumentos, ya consumiéndose con el uso ó bien por lejítimo los ritos mas antiguos y mas respetables,
haberse estraviado, podia ser reparado ó reemplaza porque veian en ellos la condenacion de sus errores.
do mientras que subsistia este aceite de uncion; mas Como las unciones del bautismo son un símbolo de
llegó á desaparecer en tiempo de la destruccion del purificacion, de salud espiritual, de gracia y de fuer—
primer templo edificado por Salomon, y falló en el za, no ha debido pues creerse en los primeros siglos,
segundo construido por Zorobabél. que era solamente el efecto del bautismo excitar la
Ya hemos visto en el artículo precedente que en fé, y colocarnos en el número de los fieles, como
todo tiempo la accion de derramar sobre alguna per pretendian los socinianos instruidos por los protestan
sona ó sobre alguna cosa una porcion de aceite odo les. V. UNCION.
rífero era un símbolo de consagracion; que este ri ACElTE DE LOS ENFERMOS, consagrado por el
to era ya conocido por los patriarcas; este era un sig— obispo para administrar á los enfermos el sacramento
no muy natural de curación espiritual, de la gracia de la estremauncion. Es muy estraño que Bingham,
divina y de sus operaciones en nuestras almas. La habiendo escudriñado con tanto esmero el origen de
Iglesia cristiana, pues, ha juzgado muy sábiamente los ritos eclesiásticos, no haya dicho cosa alguna acer
que convenia conservar este antiguo rito, universal, ca de la uncion de los enfermos; se presume que las
enérgico, al cual estaban acostumbrados los pueblos, palabras del apostol Santiago, c. 5, y. 14, le habrán
y cuya significacion no podian desconocer; por con— detenido. V. ExTREMAUNCIoN.
secuencia se ha servido de él en el bautismo, en la
confirmacion, en la estremauncion, en el sacramen Acemetas, que no duermen. Nombre de cier—
to del orden, y aun en muchas consagraciones de co— tos religiosos muy célebres en los primeros siglos
sas inanimadas. -

de la Iglesia, especialmente en el Oriente, llamados

ACEITE DE L0S CATECUMENOS. Aceite consa así, no porque tuviesen los ojos siempre abiertos sin
grado por el obispo en el Jueves Santo con el cual dormir un solo momento, como han escrito algunos
se ungia el pecho y hombros de los que recibian el autores, sino porque observaban en sus iglesias el
bautismo. S. Cirilo de Jerusalen habla de esta un cántico contínuo de los salmos sin interrupcion ni de
cion en el catech, mist. 2, y. 3. y dice á los fieles dia ni de noche. Esta voz es griega, compuesta de A
nuevamente bautizados: «Vosotros habeis sido ungi griega que significa sin y Koniao verbo griego dor
dos desde la cabeza á los pies con aceite exorcisado, 7ntr”.

y habeis participado de los frutos del olivo fecundo, Los Acemetas se dividian en tres coros, y cada uno
que es Jesucristo.... este aceite exorcisado es el símbo de ellos cantaba los salmos por su turno, relevándose
 ACE 18 ACC)
alternativamente; de modo que este ejercicio duraba lia, ó á una nacion mas que á otra. Cuando se trata
sin interrupcion todas las horas del dia y de la noche. de gracias ó de dones puramente gratuitos, nada
Siguiendo esta distribucion cada acemeta consagraba tiene que ver la justicia; lo que Dios da á un hombre
religiosamente todos los dias ocho horas enleras en no acarrea perjuicio alguno á otro; y puede por con -
el cántico de los salmos, á lo que unian una vida la siguiente concederá una persona la gracia de la é,
mas ejemplar y edificante; asi que ilustraron la Igle la del bautismo, al ó cual medio para salvarse, sin
sia de O;iente con un gran número de santos, de que por esto deba concedérselo á otra. Puede castigar
obispos y de patriarcas. á un pecador en este mundo y diferir el castigo de
Nicéforo dá por fundador de los acemetas á un su— otro hasta despues de su muerte, asi que no dando
geto llamado Marcelo, que algunos escritores moder al culpable mas que su merecido queda observada la
nos llaman Marcelo de Apamea; pero Bolando nos justicia, nadie tiene derecho á quejarse; Dios no pide
dice, que el fundador fue un tal Alejandro, monge cuenta á ninguna persona mas que de lo que la haya
de Siria, anterior con muchos años á Marcelo. Segun dado. V. JUSTICIA DE Dios, PARCIALIDAD.
Bolando, Marcelo de Apamea murió por el año 330,
y fué reemplazado en la direccion de los acemetas por Ae la las. V. A HIAs.
Juan Calibio, y este último por Marcelo.
Se lee en S. Gregorio de Tours y en otros muchos Achismelec. V. ABIATHAR.
escritores que Sigismundo, rey de Borgoña, inconso
lable por haber hecho perecer á su hijo Geserico, Acólito, es decir, el que acompaña. En los auto
príncipe que habia tenido de su primera muger, á res eclesiásticos, se daba especialmente este nombre á
instancias de una malvada princesa, con quien se ha los clérigos jóvenes que aspiraban al santo ministerio
bia casado en segundas nupcias, y que era hija de y ocupaban entre el clero el primer lugar despues de
Teodorico, rey de Italia, se retiró al Monasterio de los subdiáconos. En la Iglesia griega no habia acóli—
S. Mauricio, conocido anteriormente bajo el nombre tos, al menos ninguna mencion hacen de ellos los
de Agon, y estableció los acemetas, para dejar en la monumentos mas antiguos; pero en la lglesia latina
Iglesia un monumento contínuo de su dolor y peni los habia desde el tercer siglo; S.Cipriano y el Papa
tencia. Cornelio hablan de ellos en sus epístolas, y el cuarto
No fue necesario mas para que el nombre de ace— Concilio de Cartago prescribe la forma para ordenar—
metas y la salmodia perpélua se usasen en el Occiden los. Los acólitos eran jóvenes de veinte á treinta años,
te, y sobre todo en Francia. Muchos monasterios, y estaban destinados á acompañar al obispo á todas
entre otros el de S. Dionisio, siguieron el egemplo partes y permanecer á su lado. Sus principales fun—
de S. Mauricio. Algunos monasterios de monjas se ciones, en los primeros siglos de la Iglesia, eran las
conformaron á seguir la misma regla. Aparece por de conducir á los obispos las cartas que las iglesias
el compendio de las actas de santa Saleverga, reu usaban escribirse mútuamente cuando se les presen
nido en un manuscrito de Compieña citado por el taba algun asunto importante que consultar; cosa que
adre Menardo, que esta santa, despues de haber edi en los tiempos de persecucion, en que los gentiles es—
cado un vasto monasterio y haber reunido trescien piaban todas las ocasiones de poder profanar nuestros
las religiosas, las dividió en muchos coros diferentes misterios, exigian un secreto inviolable y una fideli—
de manera que pudiesen continuar dia y noche en su dad á toda prueba. Estas cualidades las hicieron ad
Iglesia el cántico de los salmos. quirir el nombre de acólitos, como tambien su contí—
Se podria dar tambien al presente el nombre de nua asistencia al lado del obispo, á quien estaban obli
acemetas á algunas casas religiosas, en que la adora gados á acompañar y servir; ellos desempeñaban sus
cion perpétua del santo sacramento constituye una mensages, ó mas bien eran sus demandaderos; lleva—
parte de su regla; de manera que algunas personas ban las eulogias ó panes benditos que se enviaban en
de la comunidad se emplean dia y noche en este pia señal de comunion, llevaban aun la Eucaristia en los
doso ejercicio. V. sALMoDIA. primeros tiempos; servian en el altar á los diáconos;
Se ha llamado algunas veces á los stilitas acemetas y antes de que hubiese subdiáconos desempeñaban
y á los acemetas studitas. V. sTILITA y sTUDITA. ellos sus funciones. El martirologio observa, que te—
nian anteriormente en la misa la patena envuelta,
Acepcion de personas. La escritura lla como al presente la tienen los subdiáconos; y tam
ma de este modo la falta de un juez que favorece á hien se ha dicho que tenian la cánula ó canuto de
una parte con perjuicio de la otra, y que guarda mas metal que servia para la comunion del caliz. En fin,
consideracion con un poderoso que con un pobre: servian á los obispos y á los demas que oficiaban en
Dios lo prohibe, Deut. c. 1.ºy. 17, y en otros va la misa, presentándoles los ornamentos sacerdolales.
rios testos: es un crimen contrario á la ley natural: Sus funciones han cambiado despues; el ceremonial
Job manifiesta el horror de que estaba poseido en es— pontifical no les asigna mas que llevar los ciriales,
te punto, en el cap. 2 y 31. Se dice en el antiguo y alumbrar á los clérigos, preparar el agua y vino
nuevo Testamentó que Dios no es aceptador de per para el sacrificio, y servir tambien el incienso; este
sonas, que cuando se ha suscitado una cuestion de es el orden que los acólitos ejercen mas frecuente—
justicia, acerca de las obras buenas y de las recom mente. Tomass, disciplin. de la Igles. Fleury. Inst.
pensas, lo mismo trata á los judios que á los paganos. del derecho ecles. tomo 1.° parte 1" capítulo 6;
No se infiere, pues, de aqui, que no pueda Dios sin Grancolas, antiguo sacramento 1.” parte, pag. 12.
ofender su justicia, conceder mayor número de bene— En la Iglesia romana, habia tres clases de acólitos
ficios naturales ó sobrenaturales á una persona, fami los que servian al papa en su palacio, y se llamaban
 ACO 19 ACT
palaciegos; los estacionarios que servian en las Igle Alejandria no pudieron ignorar cuanto habia sucé
sias, y los regionarios que ayudaban á los diáconos dido en Jerusalen despues de la muerte de Jesucris
en las funciones que ejercian en los diferentes cuarte to; su conversion misma prueba la veracidad de lo
les de la ciudad. V. óRDENES MENon Es. que ha referido S. Lucas, y si hubiese alterado algu
na cosa, los fieles de Jerusalen hubieran demostrado
Acompañamiento fía nebre. V. fUNERALEs. la falsedad de su historia ; y lo mismo hubieran prac
licado los de Antioquia, Efeso y Corintio sino hubiese
Actas ó IMechos de los apóstoles. Libro sido referido fielmente cuanto acaeció entre ellos.
sagrado del nuevo Teslamento, que contiene la his 2." Las cartas de S. Pablo confirman la mayor
toria de la iglesia naciente durante el tiempo de vein parte de estos hechos, y aun los suponen. 3." El cis—
te y nueve ó treinta años, desde la ascensión de nues ina acaecido en Jerusalen entre los discípulos de los
tro Señor Jesucristo hasta el año sesenta y tres de la opóstoles y los ebionitas o judaizantes demuestra que
era cristiana. S. Lucas fue el aulor de este libro, co— no ha sido posible engañará ninguna persona, acer—
mo se refiere en el principio de él, y se le dirige á Teó ca de unos hechos que interesaban á los dos partidos.
filo, á quien habia dedicado anteriormente su Evange Despues de cierto tiempo los ebionitas traiaron de
lio. Reliere los hechos de los apóstoles, y casi siempre desacredilar la doctrina y conducta de S. Pablo; y
como testigo ocular: de aqui es que en el testo griego, forjaron unas actas falsas para hacerle odioso; mas
este libro es llamado actas. En él se ve el cumpli no se atrevieron á falsificar las act as escritas por San
miento de muchas promesas hechas por Jesu-Cristo, Lucas: por otra parte el testimonio de los ebionitas
su ascension, la venida del Espíritu Santo, las pri se presentó demasiado tarde para poder debilitar el
meras predicaciones de los apóstoles y los prodigios de un testigo ocular..." El judio, á quien Celso hi—
con que fueron confirmadas, un cuadro admirable de z0 hablar, atestigua ó supone el nacimiento de una
las costumbres de los primeros cristianos, y en fin, Iglesia en Jerusalen, tal como la refiere S. Lucas.
todo cuanto aconteció en la Iglesia hasta la dispersion El apostol S. Juan ha vivido hasta el principio del
de los apóstoles, que se ¿ para predicar el segundo siglo; seria posible, que en vida de este
Evangelio por todo el mundo. Desde el momento de santo se hubiera forjado una historia falsa acerca de
esta separacion, S. Lucas abandonó la historia de los los trabajos de los apóstoles y establecimiento de la
demas apóstoles, de quienes estaba muy distante, pa lglesia? 5." Lo que se ha llamado actas falsas de
ra dedicarse particularmente á la de S. Pablo, á los apóstoles, compuestas por los hereges, no son unas
quien habia escogido por discípulo suyo y compañe historias que contradicen á la de S. Lucas sino unas
ro en sus trabajos. S. Lucas siguió á este apostol en pretendidas relaciones de los hechos de los apóstoles, de
todas sus misiones y hasta en Roma mismo en don que no hace mencion el Evangelista: tales son las ac
de aparece que las Actas habian sido, publicadas á tas de santo Tomas, de S. Felipe, de S. Andres, etc.
los dos años de la residencia de S. Pablo en dicha escritos apócrifos, desconocidos á los antiguos Padres,
ciudad, es decir, en el año setenta y tres de la era que no se han publicado sino mucho tiempo despues,
cristiana, y en los nono y décimo del imperio de Ne y ¿ época no puede fijarse como ni tampoco los
ron. Por lo demas el estilo de esta obra, que fue escri nombres de sus autores.
ta en lengua griega, es mas puro que el de los demas El primer libro de esta clase que vió la luz públi—
escritores canónicos; y se ha observado que S. Lucas ca, y se intitulaba actas de Pablo y Thecle tuvo por
seyendo mucho mejor el idioma griegó que el he autor á un sacerdote, discípulo de S. Pablo. Su im
reo, se sirve siempre de la version de los setenta en postura fue descubierta por S. Juan; y aunque este
las citas de la sagrada Escritura. Se cila este libro en sacerdote no fue impulsado al componer esta obra por
la carta de S. Policarpo á los Filipenses, n. 1. Euse otro motivo que por un falso celo hácia su maestro,
bio le coloca en el número de los escritos del nuevo no por esto dejó de ser degradado del sacerdocio. Es—
Testamento, de cuya autenticidad jamás se ha duda - las actas fueron desechadas como apócrifas por el Papa
do; y está puesto como tal en el cánon decretado por Gelasio. Despues los maniqueos fingieron unas acias
el concilio de Laodicea, no habiéndose dudado de su de S. Pedro y S. Pablo, en las que esparcieron sus
autenticidad ni antes ni despues. S. Epifanio Haer. errores. Aparecieron á continuacion las actas de San
30. c. 3 y 6. dice que estas Actas han sido traduci Andres, de S. Juan y de los apóstoles en general, for
das en hebreo, ó en el idioma syrio-hebráico de las jadas por los mismos hereges, segun S. Agustin, San
Iglesias de Paleslina, habiendo sido por consiguiente Epifanio y Filastro; las actas de los apóstoles es
muy conocidas desde el momento de su publicacion. critas por los ebionitas; el viaje de S. Pedro, falsa
No se puede pues dudar de la veracidad de la his mente atribuido á S. Clemente; la elevacion y rapto
toria que contiene: 1." La ascension de Jesucris de S. Pablo, de que se servian los gnósticos; las ac
to, la venida del Espíritu Santo, la predicacion de tas de S. Felipe y de santo Tonas, supuestas por los
S. Pedro, sus milagros, la fundacion de una Iglesia en encratilas y los apostolicos; la menoria de los apóstoles,
Jerusalen, la persecucion de los primeros fieles, la compuesta por los priscilianistas; el itinerario de los
conversion de S. Pablo, sus viages, sus trabajos etc. apóstoles, que fue reprobado en el concilio de Nicéa;
son los hechos que se refieren; no pudiendo ser falso y otros diversos de que haremos mencion bajo el
un hecho sin que todos los demas queden desvaneci nombre de las sectas que los inventaron. Véase Jeró—
dos. Pero estos hechos son muy públicos y en gran nimo, de Virib. ilust.., c. 7. Chrisóstomo, in act. Du
número, la escena se ha representado en muchos si pin, Dissert. prelimin, sobreel nuevo Testamento; Ter
tios diferentes, para que toda esta narracion sea fa tuliano, del Bautismo; Epifanio, Heregia 8º. n.
bulosa. Los fieles de la Judea, los de Antioquia y 7. y 61: S. Agustin, De la fé contra los maniq. y en
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el tratado sobre S. Juan; Filast. Heregia 8; Dupin en actos voluntarios y no libres, como el deseo de co
Biblioteca de los autores eclesiásticos de los tres prime mer cuando nos hallamos acosados por el hambre, el
ros siglos. amor á lo bueno en general etc.; y en actos libres co
mo lo son los que hacemos con reflexion y propósito
ACTAS DE LOS CONCILIOS. V. CoNCILlos. deliberado; estos últimos son los únicos imputables,
ACTAS DE LOS MARTIRES. V. MARTIRio, MAR los solos buenos ó malos moralmente, y por consi
TIR0L0CIO. uiente dignos de castigo ó de recompensa; y son
ACTAS DE PILATOS V. PILATOs. ¿ por los moralistas actos humanos, por que
Acto, Accion. Los teólogos empleaban estos son propios de solo el hombre; los actos espontáneos
dos términos respecto á Dios y al hombre, pero en se titulan actos del hombre, á causa de que este es
diferente sentido. Dicen que Dios es un acto puro, es quien los produce, aunque tambien parece que son
to es, que no se puede suponer en Dios una potencia capaces los animales de practicarlos. En cuanto á los
para obrar, que haya existido realmente antes de la actos puramente voluntarios, los llamaremos movi
accion; Dios es eterno y perfecto; y no puede sobre mientos, sentimientos, mas bien que acciones.
venirle como al hombre una nueva modificacion, un 6.° Los uctos humanos ó libres se consideran prin
nuevo atributo ó una nueva accion, que cambie su cipalmente por los teólogos con relacion á la ley de
naturaleza, haciéndole ser lo que no era. Dios, que los ordena ó los prohibe, aprueba ó con—
Sin embargo, como no podemos comprender ni dena, y bajo este aspecto es como se juzgan buenos
espresar los atributos y acciones de Dios de otro modo ó malos, pecados ú otras buenas.
que por la analogia respecto á nosotros, nos vemos Mas se pregunta si puede haber acciones indife—
en la precision de distinguir en Dios como en el hom rentes que no sean moralmente buenas ni malas. Nos
bre, 1.º dos facultades ó potencias activas, á saber, parece dificil admitirlas respecto de un cristiano pa
el entendimiento y la voluntad, y los actos propios ra, cuya salvacion no le es indiferente el perder el
del uno y de la otra. 2.º Los actos internos ó ad intra, mérito de una accion cualquiera; luego no hay algu
y los actos externos ó ad extra, como se expresan na que no pueda ser meritoria por el motivo y auxi
los escolásticos. Dios se conoce á sí mismo y se ama: lio de la gracia. En segundo lugar, la ley de Dios no
estos son pues actos puramente internos que nada nos deja la libertad para que perdamos el fruto de
producen en lo exterior. Dios quiso criar el mundo: ninguna accion, pues que nos manda que cuanto ha
este acto de voluntad no ha sido sino interno, antes gamos, sea para mayor gloria de Dios. 1.° á los Co—
de que el mundo existiese; mas desde el momento en rintios cap. 10. y.31. En tercer lugar, se le ha pro
que existen las criaturas, este acto se tiene por exter digado y dado con tanta abundancia la gracia al cris
no, como que ha producido un efecto realmente dis— tiano, que jamas es inocente cuando no obra con este
tinto de Dios: el acto ó decreto es eterno, mas su efec auxilio. No puede pues haber para él acciones indife
to ha comenzado á existir en un tiempo dado. Como rentes sino por falta de atencion y de reflexion.
en el hombre, un pensamiento, un deseo, son actos 7." Entre las acciones buenas y loables, unas son
internos; una palabra, un movimiento, una súplica, naturales y otras sobrenaturales. Un pagano que da
una lismona, son , actos externos y sensibles: los esco limosna á un pobre por compasion, hace naturalmen
lásticos llaman á los primeros actus inmanens ó elici te una obra buena; no mos es necesaria la revelacion
tus, y á los segundos, actus transins ó imperatus. ni una luz sobrenatural de la gracia para conocer
3.° Se distinguen los actos en necesarios y en libres: que es bueno y laudable socorerá nuestros semejan—
Dios se conoce y se ama necesariamente; mas ha que. tes cuando padecen: la naturaleza sola nos inspira la
rido libremente criar el mundo, habiendo podido no piedad para con ellos. Un cristiano que socorre á un
querer y no criarle. El sentimiento interior nos con— pobre, considerando al mismo Jesu-Cristo en la per—
vence de nuestra capacidad para poner en práctica sona de este desgraciado, porque Dios ha prometido
estas dos especies de actos, asi como de la diferencia á los que se emplean en estas obras buenas el perdon
esencial que existe entre unos y otros. V. LIBERTAD. de sus pecados y una remuneracion eterna, obra so—
.." La necesidad de exponer el misterio de la brenaturalmente. La razon sola no ha podido suge
santísima Trinidad ha obligado á los teólogos á lla rirle estos motivos, y no pudo obrar de este modo si
mar en Dios actos esenciales á las operaciones comu no por medio del socorro de una gracia interior, y
nes á las tres Personas Divinas, tales como la creacion preveniente. Estas especies de obras buenas son las
los actos nocionales ó nociones, las acciones que sirven únicas meritorias y útiles para alcanzar la salud eter
para carectizar á estas personas y distinguirlas; asi, na, Respecto á las que hacen naturalmente los paga—
la generacion activa es el acto nocional del Padre, la nos, probaremos al hablar de la voz INFIEL, que no son
spiracion activa es propia del Padre y del Hijo, y la pecados, y que Dios las ha remunerado con frecuen—
procesion pertenece solamente al Espíritu Santo, etc. Cla.
Véanse estos términos. Mas, peca un cristiano cuando hace una obra bue—
Se preguntará sin duda, ¿para qué sirven todas na por un motivo puramente natural? No lo creemos
estas sutiles distinciones? sirven pues, para dar al ni vemos razon alguna con que se pueda probar: nos
lenguage teológico la precision necesaria á fin de po parece poco menos que imposible que un cristiano
der evitar los errores y prevenir los términos equívo haga una obra buena, sin que los motivos que le son
cos y fraudulentos de hereges. sugeridos por la fé tengan en ella alguna parte.
5." Se dividen nuestros actos en espontáneos, es 8." Entre las acciones sobrenaturales se distin
to es, indeliberados é irreflexivos; como la accion de guen los actos de las diferentes virtudes. Un acto de
estender el brazo para impedir una caida en tierra; fé es una protestacion que hacemos á Dios de creer
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en su palabra; por un acto de esperanza, le manifes Se puede ver en los primeros capítulos del Génesis
tamos la confianza que tenemos en sus promesas; v toda la historia de Adan, la ley que Dios le impuso,
finalmente un acto de caridad es un testimonio de su desobediencia y la pena á que fue condenado con
nuestro amor para con Dios. Estamos obligados sin toda su posteridad. Esta narracion, bien breve por
duda á producir estos diversos actos de cuando en cierto; ha suministrado ámplia materia á las conje
cuando; mas para prevenir los escrúpulos é inquie turas de los comentadores, á las disputas de los teólo
tudes de las almas sencillas, conviene advertiles que os, á los errores de los herejes y á las objeciones de
la recitacion del credo es un acto de fé; que cuando os incrédulos.
dicen creo en la vida eterna, es testimonio de es— Ademas, es evidente que el primer hombre no ha
peranza; que diciendo á Dios en la oracion dominical, podido existir sino por la creacion. Los antiguos ateos
santificado sea tu nombre, hágase tu voluntad, etc. se que decian que los hombres habian nacido por ca
hace un acto de amor de Dios. La oracion, en gene sualidad del seno de la tiera, como los hongos; los
ral, es un acto de religion, de confianza en Dios y materialistas modernos, que sostienen ser el naci
sumision á su providencia, etc. miento del hombre un efecto necesario de la aclara
cion del cáos; los sabios físicos que han calculado
Actual. Los teólogos distinguen la gracia actual y fijado, las épocas de la naturaleza, sin habernos
y la habitual, y el pecado actual y original. La gra enseñado cómo han podido nacer los hombres, los
cia actual se nos concede como un acto ó mocion tran animales y las plantas, de un globo de vidrio infla—
sitoria. Se la podria definir mas claramente, aquella mado de de su orijen, saben tan poco los unos como
que Dios nos da para ponernos en estado de poder los otros
obrar ó practicar alguna accion. Esta gracia es de La naturaleza destituida de sentimiento é inteligen—
la que habla S. Pablo cuando dice á los fil penses, cia, diremos nosotros con Holand (refleaciones filóso—
cap. 1. «No solo se nos ha concedido creer en Jesu ficas sobre el sistema de la naturaleza, c. 6.) ha pro
» cristo sino tambien padecer por su amor.» San ducido pues este ser maravilloso, cuya constitucion
Agustin ha demostrado contra los pelagianos, que la admira igualmente el anatomista que el filosófo. La
gracia actual es absolutamente necesaria para toda tierra ha hecho al hombre como un gentil hombre
accion meritoria en orden á la salvacion. vulgar produce la prosa, esto es, sin saber lo que se
La gracia habitual es la que se nos suministra por hace. Estos millones de partes que forman el cuerpo
modo de hábito como cualidad fija y permanente, in humano y que estaban derramadas en un principio,
herente al alma, que nos hace agradables á Dios y sobre el globo, se han reunido sin saber cómo ni
digios de eterna recompensa. Tal es la gracia del cuando, se han entrechocado, atraido y rechaza
bautismo en los niños. V. GRACIA. do; despues de muchos ensayos se han reunido con
Pecado actual es el que comete por su voluntad exactitud y orden tan bello como vemos: un orden
propia y pleno conocimiento, una persona, despues que escede á todo cuanto el arte ha podido producir,
de haber llegado á la edad de la discrecion. Pecado y el entendimiento concebir. Mas no es esto lo mas
original es el que contraemos al nacer, como hijo: admirable: estos mismos átomos que estaban sin vi
de Adan. V. PecADo. El pecado actual se subdivide da y en bruto han producido por medio de sus com
en mortal y venial. V. vENIAL, MoRTAL. binaciones casuales la vida, el sentimiento y la fa
cultad de raciocinar. Para evitarse la molestia de
Acuarienses. V. ENCRATITAS. darse el ser cada individuo á toda costa, se colocaron
por orden en varon y en hembra, de forma que pu—
Acuáticos., hereges que creian ser el agua un dieran en lo sucesivo propagar su especie en virtud
principio tan eterno como Dios. de la generacion. Finalmente, á sus impulsos recí—
Hermógenes enseñó que la materia era tan eterna rocos y mútua gravitacion, se debe la invencion de
como Dios, con el fin de poderse imaginar un ente de a palabra, de las ciencias y artes. Si este sistema
el que pudiera formar Dios el mundo visible. Que parece monstruoso á la razon, preciso es conocer que
riendo sus discípulos buscar la materia que habia aun agrada menos á la imaginacion que las brillantes
servido de instrumento á la accion de Dios, adopta ilusiones de la mitología....
ron aparentemente el sistema de Tales, que con Si la naturaleza ó la materia ha producido todos
sideraba al agua como el principio de todos los se estos cuerpos organizados, plantas, animales y hom
res. Asi es como el entendimiento hugiano, despues bres, en qué consiste que desde el momento en que
de haberse elevado sobre los sistemas de los anti se la observa no produce ninguna otra cosa igual?
guos, por medio del auxilio de la religion, ha vuel ¿Ha cambiado, pues, la naturaleza? ¿Porqué esta
to á retrocederal estado en que se hallaba por haberse misma naturalaza que encuentra átomos, que hizo en
dejado guiar de su curiosidad y deseo de exami Uln pº prodigios, no ha tenido lugar, y, por
narlo todo 1. qué se obstina en dejar á los seres organizados el
cuidado de reproducirse ellos mismos?..
Adan, nombre del primer hombre que Dios crió Los antiguos, que eran tan ignorantes en historia
ara ser el origen del género humano. Adan, es tam natural como en física, podían creer que un animal
¿ en hebreo nombre apelativo del hombre en ge— se formaba como la sal, por la justa posicion de di
neral; y parece formado de A aumentativo y de la ferentes moléculas reunidas en virtud de ciertas fuer
raiz Eva, Dom, elevado, superior, como para designar zas de proporcion. Se les permitia congeturar que una
el individuo principal y mas fuerte de la especie. masa de lodo, impregnada y calentada por medio de
1 Stockmans Leixicnn los rayos del sol, puede animarse, asi como se per
TOMO I. 9
 2. y
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suadían de que los insectos, las ranas, sapos y la lo que es, lo que debe á Dios y á sí mismo, y la ra
gartos, que hallaban entre el cieno del Nilo, eran zon que le asiste para confiar en la bondad de su
producidos por el lodo animado del calor. Mas es in Criador.
concebible, que en el siglo diez y ocho, despues de Tiene, pues, Dios figura corporal como el hombre?
todos los descubrimientos de los modernos, no haya Se les ha respondido á los marcionitas, maniquéos,
vergüenza para hablar aun como los antiguos, y es á los filósofos del cuarto siglo, á los incrédulos del dé
tablecer un sistema de filosofía fundado sobre unos cimo octavo, que suscitaron esta cuestion , que no
errores de que el mismo pueblo comienza á burlarse. es el cuerpo la parte principal del hombre, sino el
Un animal no puede nacer sino de su semejante: esta alina. Asique, esta alma está dotada de inteligen
es la ley uniforme é invariable de la naturaleza. Nin cia, reflexion, voluntad, libertad y accion: tiene
¿ ente organizado se forma por aposicion, ni aun el la facultad de reprimir los apetitos desordenados del
mongo ni el musgo. La razon se une á la experiencia cuerpo, de pensar sobre lo presente, pasado y futuro,
para desechar las generaciones equívocas; y nos en de comunicar cuanto piensa á los demas por medio de
seña que un cuerpo organizado es un todo que no ha la palabra, de dominar á los animales, y emplear en
podido formarse sucesivamente, pues que cada parte su servicio la mayor parte de las obras del Criador,
supone la existencia de las otras. Este es un sistema conocerle, adorarle y amarle: todo esto es lo que nos
compuesto de un número infinito de máquinas que se constituye semejantés á Dios. Preferirémos, cómo al
corresponden directamente, existiendo entre ellas gunos filósofos, asemejarnos á los animales, mas bien
ciertas relaciones íntimas, como que son hechas unas que al Dios que nos ha formado?
para otras, y cuyas fuerzas concurren á un fin gene No han faltado algunos sugetos que, arrastrados
ral. Este todo se aumenta y desarolla en volumen; por su extravagante imaginacion, se esplicaron en
mas, como máquina, siempre es en pequeño lo mis— invectivas, burlescas acerca del modo con que se refie
mo que cuando llega á ser mayor: de modo que to re en la historia sagrada la formacion de la muger:
das las materias alimenticias no podrían añadir una mas no merecen la pena de ser refutados; por el
sola fibra.... contrario debemos considerar en este aclo de la om—
Imaginémonos por un momento que el ciego con nipotencia del Señor, una gran leccion dada al géne—
curso de las moléculas de la matería inanimada ha ro humano. Dios quiso por este medio dar á conocer
ya logrado producir un hombre, con el auxilio de á la muger la superioridad del hombre de quien fue
las leyes de la impulsion y de atraccion. Suponga formada; al hombre cuanto debe amará su compa
mos, contra toda verosimilitud y aun contra toda ñera, por ser parte de su misma substancia, y á am
certeza, que la naturaleza no sabe hacer ahora lo que bos, que deben conservar entre sí una union la mas
supo hacer en tiempos mas remotos; observemos en íntima, de que depende su mútua felicidad y la de
fin todos los absurdos que rodean y oprimen el sistema sus hijos.
del ateo, sometamos el buen sentido al falso juicio, y Mas en qué estado se hallaban estas dos criaturas
la evidencia al error, quién dará vida á este mani en el momento de su nacimiento? De qué felicidad dis
quí, á esta materia orgánicamente pº or las
frutaban en el estado de la inocencia, y, por útimo
manos del acaso? quién le concederá la facultad de cuál hubiera sido su destino y el de sus hijos, si no
sentir, pensar, juzgar y formar abstraciones? cómo hubieran pecado unos ni otros? La Escritura Sagrada
ha de dar la naturaleza inteligencia y sentimiento, ca no ha tenido á bien explicarse acerca de tan intere
eciendo ella de ambas cosas? pero ay la naturale santes cuestiones sino con mucha reserva.
a no es mas que la ¿? y gravitacion; y por En este libro santo se nos enseña que Dios ha cria
consiguiente tan imposible la es producir un solo pen do al hombre recto, Eccl., c. 7. y. 30., y en la jus
samiento, como á la nada crear un solo átomo. ticia, Efes, c. ... y. 2 ... por consiguiente, no solo
«Creen los materialistas, con toda la simplicidad de exento de vicio sino dotado de la gracia santifi
su corazon, que el suelo ó terreno de la Laponia pro cante que le hacia agradable á Dios. Tambien se nos
dujo al rengífero, porque este animal es indígeno en dice que el hombre fue criado inmortal, esto es, que
este pais y no puede por consiguiente vivir en un cºi podía librarse de la muerte si observaba la ley del
ma mas benigno. Qué os parece este argumento? Veis Señor y no pecaba; pues la muerte no entró en el
esos gusanos que hormiguéan en los huecos ó cavida mundo sino por medio de la envidia del demonio.
des de un queso rancio? ellos encuentran su alimen Sap., c. 2. y 23. y por el pecado, Rom., c. 5. }.
to y el calor que les conviene; luego este queso es12. Vemos tambien, en el Eclesiástico., c. 27. y. 6.
quien los ha producido. Semejante conclusion es muy que habia dado abundantemente á nuestros padres
buena para un niño que come el queso sin cuidar toda clase de conocimientos, creando en ellos la ciencia
se del gusano; mas estraña en un filósofo que se del espíritu; llenando su corazon de sentimiento, y ha
cree capaz de penetrar las ideas é interpretar la naciéndoles cer los bienes y los males. De lo que se in
turaleza.» fiere que el estado en que se hallaba el primer hom
Se ha hecho, pues, justicia á estos miserables so bre antes de su pecado era muy feliz, aunque no lo
fistas. Sus desvarios sublimes desaparecen ante la fue enteramente, porque podia perder por su desobe
narracion simple y natural del autor sagrado: «Al diencia la justicia en que habia sido criado, y por tanto
principio creó Dios el cielo y la tierra.... añadiendo: todos los ¿ se le habían concedido. Una dicha
» sea hecha la luz; y la luz fne hecha.... y despues; mas perfecta debia ser el fruto de su libre perseveran
» Hagamos al hombre á nuestra imagen y semejanza, cia en el bien. No sabemos hasta qué tiempo debería
» y el hombre fue hecho á imagen de Dios.» Gén., c. perseverar Adan en la justicia para que fuese confir
1." Por estas breves palabras comprende el hombre mado en ella y no pudiera jamas perderla.
*
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Si Adan hubiese perseverado, sus hijos hubieran el orden establecido en todas las sociedades políticas.
heredado al nacer la justicia original en que su padre Un padre, por su mala conducta, puede reducir á la
hahia sido criado, más cada uno de sus descendientes miseria á sus hijos nacidos y por nacer; puede deshon
habria quedado, quizá, sujeto á las leyes, espuesto al rarlos con anticipacion por medio de un crímen; y
peligro de violarlas, y á perder, como Adan, todos puede, en los países en que esté establecida la esclavi
los privilegios de la inocencia; este es el parecer de tud, reducirlos á esta condicion, vendiendo su liber—
Estio, siguiendo á S. Agustin, l. 2. Senten, dist. 20, tad. Conviene á toda la sociedad esta resolucion, á fin
S. 5. Se podrian aun agitar otras cuestiones; mas de inspirar á los padres el mayor horror á los críme
puesto que la Escritura las suprime, uo i milemos la nes que pueden traer para sus hijos las consecuencias
temeraria curiosidad de nuestro primer padre; no nos mas terribles, y mayor reconocimiento por parte de
acerquemos al árbol de la ciencia á buscar un fruto los hijos para con un padre que por la moderacion de
que se nos ha prohibido. sus costumbres los pone á cubierto de esta desgracia.
Por qué, preguntan los incrédulos como los mani Prosiguen diciendo nuestros adversarios, que Dios
queos, se ha impuesto al hombre una ley y una pro pudo prevenir el pecado del hombre por una gracia
hibicion, cuando sabia Dios muy bien que la habia de eficaz, sin perjudicar á su libre albedrio; y que si no
violar? Porque el hombre era criado libre, era capaz debia auxiliar al hombre con esta gracia, al mencs
de obediencia y se la debia á su Criador. El hombre se se la debia á sí mismo y á su bondad infinita. No ha -
distingue de los animales por su libre albedrio, como ber dado al hombre en esta circunstancia sino un
tambien por su inteligencia; siendo muy justo que auxilio ineficaz, cuya inutilidad preveia Dios fuese mas
Dios exigiese de él un testimonio de sumision en re bien hacerle un mal que no un bien.
conocimiento de la vida y demas beneficios que le ha Si este discurso fuese sólido, probaria que Dios, en
bia concedido. En todos los estados posibles está pues virtud de su bondad infinita, no puede dará ningun
to en orden que la dicha perfecta no sea un don de Dios hombre una gracia cuya ineficacia prevee, y por lo
uramente gratuito sino una recompensa reservada á que no puede permitir ningun pecado; mas semejan
a obediencia del hombre y á la virtud; ningun argu te razonamiento contiene tres ó cuatro suposiciones
mento de los incrédulos puede probar lo contrario: la falsas. La primera es, que un heneficio menor compa
prevision que Dios tuvo de la desobediencia futura de rado con otro mayor no es un bien sino un mal. La
A dan, no debia derogar en nada este orden eterno é segunda, que de dos beneficios desiguales, Dios se
infinitamente justo y sabio. debe á sí mismo el conceder al hombre siempre el
En efecto, dice san Agustin, por qué no debia Dios mayor, y que conduce hasta lo infinito. La tercera,
permitir que Adan fuese tentado y sucumbiese? Sabia ue cuanta mayor resistencia prevee Dios por parte
ue la caída del hombre y su castigo serian para sus ¿ hombre, tanto mas obligado está á aumentar la
¿ un ejemplo que serviria á hacerles mas gracia; como si la malicia del hombre fuera un títu
obedientes: que de esta misma raza pecadora naceria lo que le diese derecho á las gracias de Dios. La cuar—
un pueblo de santos que, auxiliados con la gracia divi ta que segun este falso discurso, es preciso considerar
na, alcanzarian á su vez sobre el demonio una victoria la bondad de Dios justamente con su infinito poder,
mas gloriosa. Si pareció, pues, que este espíritu ma como la bondad del hombre cuyo poder es limitado.
licioso habia prevalecido por algún tiempo por la cai No creemos necesario refutar mas por estenso seme
da del hombre, bien pronto fue vencido para siempre jantes absurdos. - -

en virtud de la reparacion del hombre. Lib. 1 contra Una gracia ineficaz, ó cuya ineficacia prevee Dios,
advers. leg. et proph., n. 21 y 23; De Civit, Dei, lib. es sin duda un beneficio menor que una gracia, cuya
1, c. 27, De Catech. rudib., c. 18. eficacia prevee; pero es falso que la primera sea un
Cuando los incrédulos preguntan otra vez por qué mal, un don inutil y pernicioso, una red tendida al
Dios vedó á nuestro primer padre el fruto que daba hombre, etc. Un auxilio que da al hombre toda la
el conocimiento del bien y del mal, afeclan no com fuerza necesaria para hacerle dueño de su eleccion y
prender el conocimiento de que se trata Alan cono de sus acciones, bajo ningun aspecto puede conside
cia ya el bien y el m al mora: la Escritura nos enseña rarse como un mal.
que Dios se lo habia dado Eccl, c. 17, y . 6; pues de La relacion que hace el historiador sagrado acerca
lo contrario hubiera sido tan incapaz de pecar como de la tentacion de Eva y sus consecuencias, ha dado á
los niños que no han llegado aun á la edad de la dis los incrédulos ocasion de ejercer su malignidad. Les
crecion: mas no poseia aun el conocimiento del mal parece que esta narracion encierra muchos absurdos:
físico, puesto que ninguno habia esperimentado; por que la serpiente sea el mas astuto de todos los anima
lo que carecia de toda idea de verguenza y de los re es, que tuviera una larga conversacion con la mu
mordimientos que causa la conciencia de un crimen. ger, y que esta se dejase engañar; que fue maldecida
Todo esto lo sintió despues de su pecado, y se halló en especialmente la serpiente sobre todos los animales,
el triste estado de comparar el bienestar y el do or, tal mientras que por otra parte existen pueblos que la
es el conocimiento esperimental de que quiso Dios pri tributan cierto culto; que no anduviera arrastrándo
varle. Mas no se sigue de aqui que existiese un árbol se sobre su vientre sino despues de este tiempo; que
cuyo fruto tuviera la virtud de hacer conocer el bien y ne se alimentase sino de la misma tierra, etc.
el mal. Los críticos de la historia santa prueban por medio
Los incrédulos han manifestado tambien su teme de estas mismas reflexiones, ó que Moises era un in
ridad, sosteniendo que se ha faltado á la justicia en sensato, ó que hay un sentido oculto bajo el velo de
hacer á Adan dueño de la suerte de su posteridad. esta historia, lo que sostenemos ha sido, reconoci
Esta es la condicion natural de la humanidad, y tal es do por un célebre incrédulo. «Por el modo con que
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o refiere el historiador este funesto acontecimiento, dimuerte, y la completa sumision de la carne al es
•ce, parece muy natural que su intencion no fue pre píritu, era una gracia que Dios no debia á, nuestros
•sentárnosle como cosa pásada; y esto solo debe per pimeros padres, como lo probaremos en el artículo
suadir á toda persona racional que la pluma de Moi NATURALEzA PURA; pudo, pues, sin injusticia privar
•sés escribió bajo la direccion particular del Espíritu de ella al hombre ¿a y á sus descendientes.
Santo. Con efecto, si Moises hubiera sido dueño de En tercer lugar, no se está obligado á creer, pues,
•sus espresiones y pensamientos, no hubiera ocultado que la Iglesia no lo ha decidido, que los niños, man
de un modo tan sorprendente la relacion de seme— chados con el pecado original, sean atormentados
ante acontecimiento, y hubiera hablado en un esti— por medio de castigos. No entrarán en el reino de los
»lo algo mas humano y mas propio para instruir á la cielos, pero nadie ha dicho que el lugar en que per
» posteridad, mas una fuerza superior, una sabiduria manecerán será para ellos una mansion de tormen
»infinita le dirigia en tales términos, que no escribia tos. Esta cuestion la discutiremos en la palabra BAu
»segun sus conocimientos sino en orden á los desig TjSMO.
»nios ocullos de la providencia». Bayle, Nonv. juin Los pecados actuales que hacen perder la gracia,
1686, art. 2, p. 592. serán castigados, es verdad, con suplicios elernos;
Por otra parte, es cierto que su narracio; contenga pero estos pecados no son castigos de la culpa de
algunos absurdos?.... 1."No poseemos el suficiente Adan, son males que nosotros mismos nos alraemos
conocimiento acerca de las diferentes especies de ser— voluntariamente por los vicios y hábitos que hemos
pientes, para saber hasta qué punto llega la astucia é contraido con toda libertad , y de los cuales nosotros
industria de estos animales: los que oyen hablar de mismos nos tenemos que preservar. Por último cuan
los castores por primera vez, se inclinan á creer por do se hable de la culpa de Adan y su castigo, es pre
cosa fabulosa lo que de ellos se refiere. 2.º Es además ciso no echar en olvido el modo con que Jesucristo la
evidente que el demonio tomó la figura de la serpien ha reparado, por la gracia de la redencion.
te para conversar con Eva, y esta muger no tenia ¿ por medio de la Sagrada Escritura la
bastante esperiencia aun para saber si un animal era escelencia, plenitud y universalidad de esta gracia, es
capaz óincapaz de hablar. 3". No es menos cierto que como los Padres de la Igl sia han respondido á las
generalmente tenemos horror á las serpientes, y solo objeciones de los m rcionitas y de los maniqueos, han
una larga costumbre puede habituar á los pueblos probado á los arrianos la divinidad de Jesu-Crislo, y
que están sin civilizará familiarizarse con algunas es refutaron á los pelagianos, que en su sistema reducian
pecies de estos animales. ..." Si hemos de creer á los á la nada la redencion, como hacen en el dia los so
viajeros y naturalistas, parece que existen serpientes cinianos. -

con alas, y aun aseguran que las han visto volar; Primero. Hacen notar que la promesa de la re
por consiguiente no es cierto que todas estas especies dencion es tan antigua como el pecado. Antes de con
de animales se hayan arrastrado siempre sobre su denar á Adan á los padecimientos y á la muerte, Dios
vientre. Se dice tambien que las hay de una singular habia lanzado la maldicion contra la serpiente y la
hermosura, y se han visto algunas bastante domesti habia dicho: El linaje de la muger te rompera la ca
cadas. Finalmente, si las serpientes no se alimentan beza. En virtud de esta promesa y de los méritos del
de la misma tierra, parece al menos que tragan el Redentor, dicen los Padres, que Dios no condenó á
polvoy las basuras cuando buscan los insectos de que A dan y á su posteridad sino á una pena temporal;
se nutren. Ninguna cosa, pues, ridícula ni absurda asi la redencion futura empezó ú obrar su efecto en el
contiene la narracion de Moisés. momento mismo que fue prometida. V. PRoToEv ANGE
Mas interesante es la cuestion de saber si Dios ha Llo, REDENCION.
castigado con escesivo rigor el pecado de Adan, como Segundo. Nos hacen ver que los padecimientos y la
suponen los incrédulos. La falta, dicen ellos, fue li— muerte son la espiacion del pecado y un motivo de
gera y el castigo terrible: ser condenado, durante to mérito, en virtud de la pasion del Salvador; de lo que
da su vida, al trabajo y á los padecimientos; esperi concluyen que la condenacion del hombre bajo esle
mentar sin cesar la rebelion de la carne contra el es— aspecto ha sido un acto de misericordia por parte de
píritu, y la de las pasiones contra la razon; tener con Dios. «Jesucristo, dice san Pablo, quitó todas las
tínuamente á la vista la muerte que es preciso sufrir, amarguras de la muerte, asegurándonos una resur
y un suplicio eterno con que somos amenazados, y es reccionrsemejante á la suya». 1 Cor., c. 15, y.55. V.
10 ¿ un pretendido crimen, que no es otra cosa en MuFRTE, PADECIMIENTo.
el fondo sino una ligera desobediencia; hay, pues, en Tercero. Observan que la gracia, derramada con
este caso proporcion alguna entre el pecado y la pe abundancia por Jesucristo, nos dá la victoria contra
na? A esto contestamos, en primer lugar, que es un la concupiscencia: que por medio de este combate la
absurdo el querer juzgar de la gravedad de la culpa virtud se hace mas meritoria y digna de una recom
de Adan, de otro modo que por el castigo que Dios pensa tan grande como la que estaba destinada á nues
le impuso; ¿por ventura, asistimos al consejo de Dios, tro primer padre. Por todas estas consideraciones,
ó hemos visto lo que pasó en el alma de Adan, para nuestros sanlos doctores dan á conocer la dignidad á
saber hasta qué punto era criminal ó escusable? La que nuestra naturaleza ha sido elevada por su union
facilidad de la obediencia, dice S. Agustin, es pre con el Verbo divino, y, manifiestan la grandeza del al
cisamente lo que en aquellas circunstancias agrava ma por la pºtencia del remedio.
el pecado de Adan. En segundo lugar, las miserias Segun la historia santa, la penitencia de Adan du
de esta vida, la concupiscencia misma son una con— ró mucho tiempo : vivió nóvecientos treinta años
secuencia de nuestra naturaleza: la esencion de la Gén., c. 3, y . 5. Dios le concedió esta larga vida, á
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fin de perpetuar entre sus descendientes la certeza de no hubiera tenido jamás lugar sobre la tierra sin el
las grandes verdades de que habia sido testigo, ó que pecado, y consideraban el goce de las mugeres en
habia recibido de la misma boca de Dios : ¿podian comun, como un privilegio de su pretendido resta
los hombres tener un maestro mas respetable y digno blecimiento á la justicia original. Por incompatibles
de é? Pero sin la ¿ que le habia sido hecha de que fueran estos dogmas infames con una vida cas -
un reparador, hubiera sido muchas veces tentado á ta algunos de ellos no dejaban de vanagloriarse de
entregarse á la desesperacion, al ver la multitud de ser continentes, y aseguraban, que si alguno de los
males de toda especie que su culpa habia acarreado suyos incurria en el pecado de la carne, le arroja
sobre la tierra. ban de su asamblea, como lo habian sido Adan y
Ninguno de los Padres de la Iglesia ha puesto en Eva del paraiso terrenal, por haber comido del fru
duda la salvacion de Adán ; todos ellos están acordes to prohibido; se consideraban como Adan y, Eea,
en que se efectuó por medio de Jesucristo. S. Agus y á su templo como al paraiso. Pero este templo, no
lin dice, que es la creencia de la Iglesia, y se ha con era mas que un subterráneo, una caverna obscura,
denado á Taciano y á los encratitas, que no admitian ó una estufa en la que entraban hombres y mugeres
esta verdad. completamente desnudos, y en donde todos les era
Hasta se llegó á creer , en los primeros siglos, que permitido, hasta el adulterio y el inceslo, desde el
Adán habia sido enterrado en el Calvario, y que Je— momento en que el mas antiguo ó el gee de su so
sucristo fue crucificado sobre su sepultura, á fin de ciedad, pronunciaba estas palabras del Génesis, c. 1,
que la sangre, derramada para la salvacion del mun y. 22. «Crescite et multiplicamini». Teodoreto aña
do, purificára los restos del primer pecador. Aunque de, que para cometer semejantes acciones, no tenian
esta tradicion, estaba fundada tan solo en un pasa en cuenta el decoro público, é imitaban la impuden
ge de la Escritura mal interprelado, por lo menos, dá cia de los cínicos del paganismo. Tertuliano asegura
á entender la alta idea que tenian nuestros antiguos que negaban con Valentino, la unidad de Dios, la
maestros de la estension y eficacia de la redencion. necesidad de la oracion, y trataban al martirio de
Ciertos teólogos parece que lo habian olvidado en locura y estravagancia, S. Clemente de Alejandria
teramente, al decir que el pecado original ó la caida dice, que se alababan de tener los libros secretos de
de Adán es la llave de todo el sistema del cristia— Zoroastres; lo que hace creer á Mr. de Tillemont,
nismo, el primer anillo de que depende toda la ca— que eran libros de magia.t. 2. p. 280. -

dena de la revelacion; por lo menos hubiera sido pre Esta secla infame fue renovada en el siglo XIl
ciso decir: El pecado original borrado y reparado por un cierto Tendemo, conocido todavia bajo el
completamente por Jesucristo. Sin el dogma funda— nombre de Tanguelino, que esparció sus errores en
mental de la redencion, el del pecado original podria Anvers, bajo el reinado del emperador Enrique V.
inspirarnos temor, sentimiento, dolor, tal vez deses Los principales eran, que no habia distincion entre
peracion: no escilaria en nosotros ni el reconocimien los sacerdotes y seglares, y que la fornicacion y el
io, ni la confianza, ni el amor de Dios, sentimientos adulterio eran acciones santas y merilorias. Acom
de los cuales depende la religion: En la palabra pe pañado de tres mil malvados armados, acrediló esta
cado original demostrarémos que la creencia de uno doctrina por su elocuencia y ejemplos; le sobrevi
de estos dogmas no puede subsistir sin la del otro. vió poco su secta, y fué extinguida por el celo de
Algunos autores han pensado que Platon tuvo co S. Noberto. - -

nocimiento de la caida de Adan, y que lo habia Otros adamistas aparecieron tambien en el si

aprendido por la lectura de los libros de Moisés. Eu— glo XIV, bajo el nombre de turlupinos y hermanos
sebio en su preparacion evangélica, lib. 12, cap. 11, pobres, en el Delfinado y la Saboya. Sostenian que
cita una fábula sacada de los symposiacos de Platon, el hombre, llegando á un cierto eslado de perfeccion,
debia estar eximido de la ley de las pasiones; d le
en la que parece referir esta historia de un modo ale
górico; pero esta alusion no está muy manifiesta ni jos de que la libertad del hombre sabio dependiera
es absolutamente cierla. En tiempo de Platon, los li— de no estar sujeto á su imperio, por el contrario, la
bros de Moisés no estaban traducidos al griego, y es hacian consistir en sacudir el yugo de las leyes divi
te filósofo no tenia conocimientos del hebreo. Por otra nas. Andaban enteramente desnudos, y cometianá
la vista de todo el mundo las acciones mas brutales.
parte sabemos que los judios no manifestaban con fa—
cilidad sus libros á los paganos. Lo mismo debere—
El rey Cárlos V hizo quemar á muchos; asi como
nos pensar de la fábula de Pandora, que algunos algunos de sus libros en Paris,, en la plaza del
han lomado por una alteracion de la historia de la mercado de animales vivos, al salir de la calle de
caida de Adan. S. Honoré.
Un fanático llamado Picard natural de Flandes,
Adamitas, ó Adannianos. Secta de anti habiendo penetrado en Alemania y en Bohemia á
guos hereges, que apareció á fines del segundo siglo; principios del siglo XV, renovó sus errores y los es
se cree que fueron una rama de los basilidianos y de parció principalmente entre , el ejército del amoso
los carpocracianos Zisca. Apesar de la severidad de este general, Pi
Segun S. Epifanio, tomaron el nombre de adami card engañaba á los pueblos con sus prodigios y se
tas, porque pretendian haber sido restablecidos al calificaba con el título de hijo de Dios. Pretendia que
estado de naturaleza inocente; el ser en un todo se habia sido enviado al mundo como un nuevo Adan,
mejantes á Adan en el momento de su creacion, y ara restablecer en él la ley de la naturaleza, la que
r consiguiente deber imitar su desnudez. Detesta ¿a consistir principalmente en la desnudez de to
an el matrimonio, sostenian que la union conyugal das las partes del cuerpo y en la mancomunidad de
 ADE 26 ADI
las mujeres. Mandaba á sus discípulos que fueran pero en un sentido diferente del de los católicos.
desnudos por las calles y las plazas públicas; en esto Estos hereges se conocen mas bien bajo el nombre
no fué tan reservado como los antiguos adamitas que de empanadores. Su secta se dividia en cuatro ra
no se atrevian á practicarlo mas que en sus reunio mas, unos sostenian que el cuerpo de Jesucristo
nes. Algunos anabaptistas intentaron en Holanda el está en el pan, otros alrededor, otros sobre él y los
aumentar el número de los sectarios de Picard, pero ultimo debajo. V. EMPANACION.
la severidad del gobierno acabó bien pronto con ellos.
Esta secta hizo tambien prosélitos en Polonia y en Adlaforistas, nombre formado del griego,
Inglaterra, se reunian por la noche y se cree que una ADIAFoRos, indiferente. Se dió este título en el siglo
de las máximas fundamentales de su sociedad, esta XVI á los luteranos moderados, que se adhirieron á
ba contenida en este verso: las opiniones de Melantchon, cuyo carácter pacífico
Jura, perjura, secretum prodere noli. no se acomodaba al carácter violento de Lutero. Por
Mosheim que examinó de cerca la historia de estos consiguiente, el año de 1548, se llamaron asi á los
fanáticos, cree que el nombre de Picardos no traia que suscribieron al interim que el emperador Cár
su origen de un gefe llamado de esta manera sino los V hizo publicar en la dieta de Ausburgo. V. Lu—
que era una corrupcion de la voz begardos ó bigardos. TERAN0S.
Véase esta palabra. Su máxima capital era, que el que Esta diversidad de opiniones entre los luteranos,
use vestidos para cubrir su desnudez y no sea capaz causó entre sus doctores una disputa violenta; se
de ver sin emocion del cuerpo desnudo de una perso— trataba de saber: 1.° Si es permitido el ceder algo
na de sexo diferente al suyó no es todavia libre, es á los enemigos de la verdad, en las cosas puramente
decir, suficientemente desprendido de las afecciones indiferentes y que no interesan esencialmente á la
corporales. Era imposible que con un tal , principio religion. 2.º. Si las cosas que Melanchthon y sus
puesto en práctica, no hubiera nada de criminal en partidarios juzgaban indiferentes lo eran en realidad.
sus reuniones. Tampoco Mosheim opina de la misma Estos disputadores, que llamaban enemigos de la ver
manera que Basnage, que ha tratado de justificar los dad á todos los que no pensaban como ellos, tenian
icardos ó adamitas de Bohemia, y los confundió con buen cuidado en no confesar que las opiniones ó los
0s valdenses. Trad. de l'Histoire eclesiast. de Mos ritos á que se habian adherido eran indiferentes en el
heim, t. 3, pag. 72. fondo de la religion. V. MELANCHThoNIANos.
Algunos sabios son de opinion que el origen de los
adamitas data de una época mas antigua que la del Adlivlmaciona. V. A DivINo.
establecimiento del cristianismo : para esto se fun
dan en que Maacha, madre de Asa rey de Judá, era Adivino Adivinacion. Se ha llamado en
gran sacerdotisa de Príapo y que en los sacrificios general adivino á un hombre al cual se le supone
nocturnos que hacian las mugeres á este ídolo obsce el don, talento ú arte de descubrir las cosas ocultas.
no, se presentaban desnudas. El motivo de los ada— y como el conocimiento del porvenir está vedado á
mitas no era el mismo que el de los adoradores de los hombres, se denomina adivinacion el arte de co—
Príapo; y se ha visto por su teología, que no toma nocer y predecir el porvenir.
ron del paganismo mas que el espíritu disipacion, La curiosidad y el interés, pasiones inquietas, pe—
y no el culto de Príapo. ro naturales á la humanidad, son el origen de la ma—
Adelfo, filósofo platónico que adoptó los princi yor parte de sus errores y crímenes. El hombre qui—
pios de los gnósticos, como explanaciones del pla siera saberlo todo; ha llegado á imaginarse que la
tonismo; reunió muchos libros de Alejandro el de Divinidad tendria la complacencia de condescender
Lybia y de las pretendidas relaciones de Zoroastres, á sus deseos. Frecuentemente le importa conocer co
los mezcló con los principios del platonismo y con sas que no estan al alcance de sus conocimientos:
os de los gnésticos. De esta amalgama formo un y se ha lisongeado que Dios, ocupado de su felicidad,
cuerpo de doctrina que sedujo á muchos en el si— consentiria en revelárselas.
glo III. No ha sido pues necesario que los impostores vi—
Este mismo Adelfo pretendia haber dado un paso niesen á sugerirle esa confianza, sus deseos fueron
mas que Platon en el conocimiento del Ser Supre— el manantial de sus errores. Ha creido ver revela
mo. Plotin, que era el gefe de los platónicos le refu— ciones y predicciones en todos los fenómenos de la
tó en sus lecciones y escribió contra él. Aurelius hizo naturaleza: esta es una de las razones, por las que
cuarenta libros para refutar el de Zostriano, y Por en todas partes ha visto espíritns, genios é inteli
firio , trabajó tambien mucho, para demostrar que encias prontas á hacer el bien ó el mal á los hom
aquel libro de Zoroastres era nuevo y compuesto por ¿ Todo acontecimiento, sorprendente ha sido
Adelfo y sus discípulos. considerado como un presagio y un pronóstico de la
Tambien tenemos una obra de Plotin, contra felicidad de la desgracia.
aquellos gnósticos puramente filósofos, como se ve Si relexionamos un poco, concebiremos fácilmen
por la creencia que el mismo les atribuye en su l. 18. te, que esta manía de saberlo todo es una especie de
p. 203. rebelion contra la Providencia Divina. Dios no ha
uerido suministrarnos mas que conocimientos muy
A deseanarios, nombre formado por Prateolus limitados, á fin de hacernos mas sumisos á sus ór—
del verbo latino adesse, estar presente, y empleado denes, y porque ha juzgado que las luces mas es
para designar los hereges del siglo XVI que recono tensas nos hubieran sido mas perjudiciales que be—
cian la presencia real de Jesu-Cristo en la Eucaristia, neficiosas. Asi la adivinacion no es un acto de reli
 ADI 27) ADl
gion ni una prueba de respeto para con Dios sino contorsiones que hacian para procurarse su preten
una impiedad; supone que Dios secundará nuestros dida inspiracion. Existen muchas clases de plantas
deseos, aun los mas injustos y absurdos. Los pa y hongos, que causan á los que las comen un deli
triarcas consultaban al Señor, pero no usaban nin rio en el cual hablan mucho, y hacen predicciones
guna clase de adivinacion, y vemos que Dios la pro— al acaso: los hombres sencillos han tomado el delirio
hibia con toda severidad á los judios. Levít. c. 19 y or una inspiracion. Tambien les estaba prohibido á
Deut. c. 18. os judios el consultarlos y darlos fe. Idem.
Apenas seria posible enumerar todos, los medios La cuarta es la de los hobberim ó encantadores,
que se han puesto en práctica para descubrir las co que empleaban fórmulas de palabras y de cánticos
sas ocullas, y presagiar el porvenir, pues que ape— para recibir la inspiracion. Nadie ignora hasta qué
nas existe absurdo á que no se haya recurrido. Mas punto llegó la supersticion de las palabras eficaces, ó
para demostrar que la maldad de los falsos inspi de las fórmulas mágicas para obrar efectos sobrena—
rados tenia mucha menos parte de estos desórdenes turales. Esta era una consecuencia de lo que se con—
que los juicios erróneos de los individuos en parti fiaba en la oracion en general. Moises prohibió esta
cular, nos bastará el recorrer las diferentes especies práctica. Deut. c. 18, y. 11.
de adivinacion de que se habla en la Escritura : es— La quinta no quiere que se interrogue á los espí
tas son poco mas ó menos las mismas en todos los ritus pítones, oboth que se cree fueron los ventrílo
pueblos, porque en todos ellos han obrado las mis cuos. En el dia todo el mundo sabe que el talento de
ItlaS CaUSaS. hablar con el vientre es natural á ciertas personas;
La primera se practicaba por medio de la inspec pero los que estaban dotados en otro tiempo de él
cion de los astros, de las estrellas, de los planetas pudieron con mucha facilidad sorprender á los igno
y de las nubes; esta es la astrologia judiciaria ó apo rantes, haciéndoles oir voces, cuya causa no cono.-
telesmática, es decir, eficaz; y que Moises denomi cian y que parecia venir desde muy lejos. La voz
nameonen. Al observar que las diferentes mutacio— ue resulta de los ecos, ha dado lugará la misma
nes de los astros anuncian con frecuencia de ante— ilusion. El mismo crítico que hemos citado es de
mano los cambios del aire, este fenómeno unido á opinion que ob significa espíritu, sombra, manes de
su curso regular y á la influencia que tienen sobre los muertos, porque la pitonisa de Endor se llamaba
las producciones de la tierra, persuadió á los hom Bahhalath ob, la que manda á los ob, á los espíritus;
bres que los astros estaban animados por espíritus, por esta razon Moises prohibió la necromancia en
por inteligencias superiores, por dioses que podian aquel lugar.
instruir á sus adoradores; que su marcha y muta La sesla prescribe los jiddeonim, los videntes, los
ciones, eran significativas; de aquí los horóscopos, que pretendian haber nacido con el talento de adi
los talismanes, el miedo á los eclipses, á los meteo vinar y predecir, ó haberlo adquirido por su estu -
TOS, etc. dio. Estas dos últimas especies de adivinacion son
El conocimiento perfecto de la astronomía no fué las únicas, cuyo origen viene seguramente de la
suficiente para sacar á los hombres de este error, supercheria de los impostores.
porque los caldeos, que eran los mejores astrólogos, La séptima es la evocacion de los muertos, llama
eran al mismo tiempo los mas infaluados con la as— da por los griegos necromancia. La practicaron al
trología judiciaria; no solo los pueblos sino aun los gunas veces los judios, á pesar de la prohibicion de
filósofos han creido que los astros estaban animados. Moisés, Deut. c. 18, y. 11. Saul quiso interrogar á
Moises, mas sabio, advirtió á los hebreos que los as— Samuel despues de su muerte, para saber el porve
tros del cielo no son mas que antorchas que Dios ha nir, y Dios hizo que se apareciera efectivamente á
hecho para utilidad de los hombres. Deut. c. , este profeta para anunciar á Saul su próxima muer
y., 19. Un profeta les dijo que no temiesen los signos te. L. Reg. c. 18. Los que rendian culto á los muer
del cielo, como lo hacian las demas naciones. Jere— tos suponian que se volvian mas sabios y podero
mias c. 10, y. 2. sos que los vivos, y podian serles útiles. Los sueños
La segunda se ha llamado mecatscheh, que se tra en que se creia ver muertos y oirlos hablar, inspi
duce por augurio; es la adivinacion por medio del raron naturalmente esta confianza.
vuelo de los pájaros, por sus gritos, sus movimien La octava consistia en mezclar muchas varitas
tos y otras señales: las aves hacen con frecuencia ó flechas marcadas con ciertas señales, y juzgar del
presentir el buen tiempo, ó la lluvia, el viento ó la porvenir por la inspeccion de la que se sacaba al
tempestad; predicen el invierno por su marcha, y acaso. Se llamaba á este arte belomancia ó rabdoman
anuncian la primavera con su vuella. Se ha creido cia; se habla de él en Oseas y en Ezequiel.
que podian anunciar del mismo modo los demas acon La novena era la hepatoscopia ó la ciencia de los
tecimientos. En este punto los romanos llevaron la arúspices, la inspeccion del hígado y de las entrañas
supersticion hasta la puerilidad: este abuso estaba de los animales. Por medio de esta inspeccion se po—
prohibido á los judios. Deut. c. 18. y; 10. Un sabio dia juzgar de la salubridad del aire, de las aguas,
crítico cree que la voz hebrea puede significar tam de los pastos de algun pais, y por consiguiente de la
bien la adivinacion por la serpiente, porque nahhasch prosperidad futura de una alqueria ó de una colo
significa la serpiente. Memoires de lº Academie des nia que trataba de establecerse en él. Pero llegó la
Inscriptions, t. 70, in. 12, pág. 104. locura hasta creer que por esta inspeccion se podian
La tercera, llamada mecatscheph, esla espresada llegar á preveer los acontecimientos de toda clase.
en los Setenta por prácticas ocultas y maleficios. Tal Para colmo de demencia, imaginaron que el porve
vez sean las drogas que tomaban los adivinos, y las nir estaba marcado con mas claridad en las entra
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ñas de los hombres que en la de los animales. No po tes y pertinaces que creen en la adivinacion, y están
demos pensar sin estremecernos en los horribles sacri prontos á renovar las supersticiones del paganismo;
ficios á que daba lugar este frenesí; pero no encon porque las pasiones que las han dado origen son
tramos ningun vestigio de él entre los judios. siempre las mismas. En vano se considera á la fi
10. º Por último Moises les prohibio el confiar en losofia como un preservativo seguro contra toda clase
los sueños, Deut., c. 18, y. 11. Esta debilidad, no de demencia: los griegos y los romanos que se te—
solo ha sido patrimonio de los ignorantes, sino tam nian por filósofos, no eran en este punto mas sabios
bien de las personas instruidas, en todos tiempos y que los demas pueblos. Segun el testimonio de Xe
en todas las naciones; no ha sido necesario que los nofonte, Sócrates opinaba que la adivinacion era un
impostores se tomaran mucho trabajo para seducirá arte enseñado por los dioses; consultaba con la ma
los hombres. or gravedad al oráculo de Delfos, y aconsejaba á los
A todo esto es preciso añadir la adivinacion por ¿ que hicieran lo mismo. Todo el mundo sabe
líneas trazadas, por caracteres colocados al caso, por cuál fue la pertinacia de Juliano y de los demas pla
las serpientes, etc. tónicos nuevos, respecto de la leurgia, y en esto no
Esta sucinta descripcion que podríamos llevar mas hacian mas que imitar á los estóicos. La incredulidad
adelante, demuestra que una mala física, los espe— misma no es un remedio muy eficaz contra la supers—
rimentos imperfectos de medicina, las observaciones ticion, pues que los epicúreos han sido muchas ve—
defectuosas sobre la influencia de los astros, el ins ces tan supersticiosos como las mugeres. No es impo—
tinto de los animales y los acontecimientos fortuitos sible el encontrar hombres que crean en la mágia sin
han sido causa de todos los errores y supersticiones creer en Dios.
posibles; que el politeismo ó la confianza en los pre Ciceron echa en cara á todos los filósofos en ge
tendidos genios motores de la naturaleza ha debido neral el haber contribuido mas que nadie á estra
necesariamente producirlos, que la vana curiosidad viar los espíritus. «Asi como es necesario, dice, es—
de los pueblos ha tenido mas parte en ella que la su. » tender y afirmar la religion por el conocimiento de
percheria de los falsos inspirados. » la naturaleza, del mismo modo es preciso desarrai
Moises no esceptuó ninguna, las proscribió todas »gar la supersticion. Este monstruo que nos sale al
bajo el nombre de adivinacion. Por otra parte, la »encuentro á cada paso, nos persigue y nos atormen
historia de la creacion , la creencia de un solo Dios, » ta; si se oye á un adivino, si hiere nuestros oidos
de una providencia general y particular tenian que »un presagio, si se ofrece un sacrificio, si se levan
preservar de ella á todos los adoradores del verdade »tan los ojos hácia el cielo, si se encuentra á un astró—
Dios, Moises prometió á los hebreos que Dios les en— » logo ó á un augur, si vemos un relámpago, si true
viaria profetas, les mandó escucharlos y cerrar los »na, si cae un rayo , si acontece una cosa estraordi
oidos á las vanas promesas de los adivinos y de los »naria que se asemeje á un prodigio, aunque no sea
factores de prodigios. Ibidem. Un legislador que toma »imposible quesuceda muchas veces, jamas permane
tantas precauciones para preservará su pueblo de to - »cemos tranquilos. El mismo seño, destinado á ser
da clase de impostura, no puede ser impostor. Pero »el remedio y fin de nuestros trabajos y desgracias,
los judios olvidaron muchas veces las lecciones y las »es un nuevo manantial de cuidados y tenores, cuan
leyes de Moises; al entregarse á la idolatria volvian »do es interrumpido por los sueños. Si se fijára menos
á incurrir en todas las locuras de que siempre iba » la atencion en todas estas cosas, y no se encontrara
acompañada. »un apoyo en los filósofos, aun los mas ilustrados y
No obstante, algunos incrédulos pretenden que el » que pasan por los mas sabios se llegarian á despre
patriarca Jose habia aprendido y practicado en Egip ciar». De Divinat. lib. 2, n. 19. -

lo el arte de adivinacion. Dice á sus hermanos, por
medio de su enviado. Gén., c. 1, y. 3: «La copa
» que habeis cogido es en la que bebe mi Señor, y de
» la que se sirve para sus angurios». Y en el y. 75 les
dice el mismo. «¿Ignorais que no hay quien me igua
le en la ciencia de adivinar?» Por estas palabras es
Thiers, Traité de Superst., premiere patie, lib.
3, c. 1 y sig., Bingham , Orig. Eccles. lib. 16, ch.
5, refieren los decretos de los concilios y los pasajes
de los Padres de la Iglesia que condenan y prescriben
toda clase de adivinacion. W. MAGIA, SUPERTICION, PRE
SAGI0,

evidente que José practicaba la adicinacion por me

dio de las copas, que consistia en echar caracteres Adjuracion. Mandato que se hace al demonio,
mágicos en una copa llena de agua y leer lo que de de parte de Dios, para que salga del cuerpo de un
esto resultaba. Pero un escritor reciente, que entien— poseido, ó declare alguna cosa. - -

de muy bien el hebreo, ha hecho ver que deben tra Esta palabra se deriva del latin adjurare, conjurar,
ducirse de la manera siguiente los dos versículos: solicitar con instancia, y asi se llaman las fórmulas
» ¿No teneis la copa en que bebe mi señor? Está ha del exorcismo, porque casi todas eslan concebidas en
»ciendo y haria investigaciones á causa de ella...... estos términos: Adjurote spiritus immunde, per Deum
»¿No concebis que un hombre como yo la buscará vívum ut, etc.
«una y muchas veces con cuidado?» El mismo tér— En el Diccionario de Jurisprudencia, se ha critica
mino que significa auguraró adivinar, significa tam do á los curas que conjuran, echan exorcismos á las
hien volver á buscar, y este sentido no presenta la tempestades y á los animales dañinos; volveremos á
menor dificultad. hablar de esto en la palabra Exorcismo.
A pesar de los progresos de las ciencias natura
les y de las prohibiciones y amenazas de la religion, Adonai. Entre los hebreos es uno de los nom
existen todavia espíritus curiosos, frívolos, ignoran bres de Dios: significa mi Señor. Los Matoretas han
 «.
ACO ,
colocado bajo el nombre que se lee en el dia, Jeho dos los que no están bautizados. «Ved, dice á los
rah los puntos que convienen á las consonanles de »fieles el apóstol S. Juan, qué bondad ha tenido por
la palabra Adonai, porque estaba prohibido entre » nosotros Dios Padre, al concedernos el nombre y los
los judios, el pronunciar el nombre propio de Dios: » derechos de hijos de Dios. I Joan., c. 3, y, 1. Luego,
solo el sumo sacerdote tenia este privilegio cuando »continúa S. Pablo, si nosotros somos hijos, somos
entraba en el santuario. Los griegos tambien han » tambien herederos de Dios, coherederos de Jesu
puesto la voz Adonai en todos los pasages en que » cristo.» Rom. c. 8. y 17. Dios es el Padre de todos
se encuentra el nombre de Dios. La palabra Adoñai los hombres, pues que es el criador y bienhechor de
está sacada de la raiz don, que en todas las lenguas todos, no solo en el órden de la naturaleza sino en el
significa elevacion, grandeza, tanto en el sentido de la gracia; á ninguno niega los auxilios suficientes
propio como en el figurado Los griegos los han tra— y necesarios para salvarse. Sin embargo, Dios es
ducido par kIRIos, y los latinos por Dominus. Tam con especialidad el Padre de los cristianos, porque
bien se han aplicado algunas veces á los hombres, co les da por el bautismo, un nuevo nacimiento, , y les
mo en este versículo de salmo 104, Constituit eum concede gracias de salud mas poderosas y abundantes
domir um domus suaº, hablando de los honores á que que á los demas hombres. V. Hijo DE Dios.
fue elevado Jose por Faraon. Véase Genebrad, Le
Clerc, Cappel de nomine Dei tetragram. Adoracion, Adorar. Este término, tomado
en su significacion literal, significa llevar la mano á
Adopcianos. Hereges del siglo octavo, que la boca, besar su mano por un sentimiento de vene
preleridian que Jesucristo, en cuanto hombre, no racion. En todo el oriente este ademan es una de
era hijo propio ó natural de Dios, sino solo su hijo las mayores señales de respeto y sumision: está en
adoptivo. Era renovar el mismo error de Nestorio. uso respecto de Dios y de los hombres. En el libro de
Esta secta se levantó bajo e imperio de Carlomag Job, c. 31 y 17, se dice: «si he mirado al sol en to
no, hácia el año 778. Con este motivo Elipando, ar »do su esplendor y á la luna en su claridad, si he
zobispo de Toledo, consultó á Felix, obispo de Urgel, » besado mi mano con una alegría secreta, lo que es
acerca de la filiacion de Jesucristo, y este obispo le » un gran pecado, y una manera de renegar del
contestó, que en cuanto Dios, era verdadera y pro » Dios todopoderoso.» En el tercer libro de los Re—
piamente hijo de Dios, engendrado naturalmente por yes, c. 19, y. 18: «me reservaré siete mil hombres
el Padre; pero que Jesucristo en cuanto hombre ó hijo » que no hayan doblado la rodilla delante de Baal, y
de Maria, no lo era sino adoptivo de Dios; decisioná » todas las bocas que no hayan besado sus manos pa
que suscribió Elipando. El papa Adriano, advertido »ra adorarle.» Minucio Felix dice que Cecilio, pa—
de este error, le condenó en una carta dogmática di sando por delante de la estátua de Serapis, besó su
rigida á los obispos de España. mano, como es costumbre entre el pueblo supersti
Se luvo un concilio en Narbona en 791, en el cioso. Los que adoran, dice S. Gerónimo, tienen cos
que se discutió la causa de los dos obispos españoles, tumbre de besar la mano y la tierra: los hebreos, se -
pero no se decidió nada. Felix se retractó y despues gun el génio de su lengua, ponen el beso por adora —
volvió á sus errores; Elipando por su parte, habien cion: se dice Salmo 2, y 12: «besad el hijo, por te
do enviado á Carlo—Magno una profesion de fé que »mor de que no se irrite;» es decir, «adoradle y some
no era ortodoxa, hizo reunir este príncie tn cón » leos á su imperio.
cilio numeroso en Francfort en 79, en el que se Faraon hablando á José, le dice: «todo mi pueblo
condenó la doctrina de Felix y Elipando, lo mismo » besará la mano á vuestro mandalo, recibirá vues
que en el de Forli del año 795, y poco tiempo des » tras órdenes como las del rey.» Abraham adora al
pnes en el concilio celebrdo en Roma, bajo el pon pueblo de Hebron. Gén, c. 23, y 7 y 12. La suna
tificado de Leon IIl. nita adora á Eliseo que habia resucitado á su hijo
Felix de Urgel pasó su vida en una alternativa IV. Reg. c., y 37, etc. En estos diversos pasages el
contínua de abjuraciones y recaidas, y la terminó en término adorar no significa ciertamente lo mismo ni
la heregía; lo mismo sucedió con Elipando. la misma clase de culto.
Geoffroi de Claraval imputa el mismo error á Gil Cuando se emplea respecto de Dios, significa el cul
berto de la Poirée; Scoto y Durando parece no estar to supremo que no es debido mas que á él solo; cuan
muy distante de esta opinión, que parece venir á re do se pone en uso haciendo referencia á los ídolos, es
caer en la de Nestorio. un acto de idolatría; si se hace aludiendo á los hom
El error de que hablamos, fue refutado con buen bres esta voz no espresa mas que culto puramente ci
éxito por S. Paulino, patriarca de Aquilea y por Al vil. El mismo equívoco tiene lugar en el hebreo y en
cuino. En la vida que Madrissi ha dado del prime las otras lenguas.
ro, ha discutido muchos hechos concernientes á Eli Besar la mano, doblar las rodillas, prosternarse,
pando y Felix de Urgel, que antes no fueron sufi son señales esteriores, cuyo sentido varía, segun la
cientemente ilustrados. Histoire de l" Eglise ga!lic, intencion del que las pone en práctica.
t. 5. año 797, 799. Los protestantes declaman contra nnestra creencia,
sin razon alguna, porque decimos adorar la cruz y
Adopeion. En el sentido teológico es la gra damos señales de respeto á la vista de este signo de
cia que Dios nos da por medio del bautismo; este sa nuestra redencion. Es evidente que en estos casos no
cramento nos imprime el caracter de hijos adoptivos tornamos el término de adoracion en el mismo sentido
de Dios, de hermanos de Jesucristo, de herederos que cuando le aplicamos á Dios; este culto se refiere
de su gloria: derecho precioso del que se ven priva áJesucristo Hombre-Dios, y no se limita ni á la ma
rono 1. 10
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leria, ni á la forma de la cruz. V. la Esposition de tuosos. Acostumbrados á la lisonja, desde la mas tier
la foi cathólique, por M. Bossuet. na edad por todos los que les rodean apenas conocen
Dicen que solo Dios debe ser adorado; si por esto, sus propios defectos, y de consiguiente no pueden
entienden que debe ser honrado como ser supremo, es corregirse.
una verdad; si quieren decir que ha de ser honrado La adulacion es una mentira perniciosa: trae siem
como un ser respetable es una falsedad. El culto, el ho pre su origen de una pasion secreta del interés, de la
nor y el respeto deben ser proporcionados á la dig vanidad, de la ambicion, del temor, y á veces de la
midad de los personages á que se dirigen, y seria un malignidad; cuando llega hasta escusar los vicios y
absurdo el sostener, que el respeto no es debido mas alabar las malas acciones, es una maldad detestable.
que á Dios. V. cULro. Vale mas, dice el Eclesiastés, ser reprendido por un
Dicen y repiten sin cesar que adoramos á los san sabio, que el ser engañado por las adulaciones de los
tos, á sus imágenes y reliquias. Siempre padecen la insensatos. Cap. 7 y 8. Asi como el Evangelio nos
misma equivocacion. Honramos á los santos, y les manda ser candorosos y sínceros, y nos prohibe la
damos testimonio de respeto, pero no de la misma ma mentira é impostura, del mismo modo nos tiene ve
nera que á Dios; respetamos sus imágenes por lo que dada la adulacion. «Vosotros sabeis, dice S. Pablo á
representan, á sus reliquias, porque les pertenecie— » los fieles, que no hemos tratado de persuadiros con
ron; pero no los adoramos, si por adorar se entiende »discursos lisongeros, ni por un motivo de interés;
el culto supremo. Aun cuando algunos autores católi » Dios es testigo de que no deseamos agradar mas que
ros, poco esactos en sus espresiones, hubieren apli »á él solo, y no á los hombres, y que no esperamos
cado mal el término de adoracion, esto nada proba » ni de vosotros ni de los demas ninguna gloria hu
ria; porque nuestra creencia está espuesta con toda »mana.» I Thes. c., 2, y 4. Esta leccion debe preser
claridad en todos nuestros catecismos. V. PAGANIs— vará los ministros del Evangelio de cualquiera tenta
mo. S. XI. cion, para debilitar las verdades de la fé ó de la moral,
Ctra grande cuestion entre los protestantes y noso con la mira de contemplar las fragilidades y preocu
tros es la de saber si se debe adorar la Eucaristía; esto
consiste en creer si Jesucristo está realmente en ella
¿ de los que les escuchan. Se dice que las ala
anzas que se dan á los jóvenes, á los grandes y á los
ó no. V. EUCARISTIAS. IV. hombres constituidos en dignidad, son lecciones que
Se entiende tambien por adoracion el homenage les enseñan lo que deben ser: desgraciadamente la
que los cardenales rinden al Papa despues de su elec— mayor parte de las veces, no sirven mas que para
cion, si esta es estraordinaria; como se practica lue disfrazar lo que son.
go que todos los cardenales van repentinamente á C. S. Ha dicho un escritor moderno que la adula
prosternarse delante de uno de ellos y le proclaman cion es la política del desprecio; y por cierto que aun
Papa. Estos términos no pueden inducirá error sino no siendo mas ni teniendo olras consecuencias seria
á aquellos que no prestan la mayor atencion á las ra detestable en gran manera. Pero la adulacion es to—
rezas del lenguaje, ó quieren engañarse á sí mismos davia mas que una fingida alabanza y un mentido
con el abuso de las voces. aprecio de la persona á quien se dirige. Si el elogia
En la palabra PAGANIsmo S. XI. refutaremos la es do pide un consejo, se le pierde adulándole; si exige
plicacion que algunos protestantes han querido dar lecciones y advertencias se le confirma en sus errores
de la adoracion, á fin de probar que los católicos ado y estravíos; si es niño se le envenena fomenlando
ran á los santos y á las imágenes. mil malas pasiones en su tierno corazon; en la ju—
ventud se le hace caprichoso, díscolo y altanero; mas
Adramélec. V. SAMARITANos. tarde se le tiende un lazo moral bajo las apariencias
de las mas lisongeras esperanzas; y no hay relacion
Adrianistas. Teodoreto pone á los adrianistas moral en la naturaleza humana, que no fracase en—
en el número de los hereges, que traen su origen de lre los crueles y desesperantes vaivenes de tan estu—
la secta de Simon el mago; pero ningun otro autor diada mentira. La adulacion lleva consigo un insulto
habla de esto. Teodoreto libro º de las Fábulas he manifiesto, y una burla sarcástica de la persona á
réticas, c. 1. quien se alude: se la rinde una especie de culto por
Los sectarios de Adriano Hanestudius, uno de los las prendas de que carece, y échansela en cara sus
innovadores del siglo XVI, se llamaron tambien asi. defectos decorándolos como bellas cualidades y virtu
Enseñó primero e: la Zelandia y despues en Inglater des. Diríase que el adulador es un refinado Maquia
ra, que era cada uno libre de conservar á los niños velo en la familia y en la sociedad y el fiel copista
por espacio de algunos años sin conferirles el bautis de un cuadro satánico. La verdad y toda la verdad
mo; que Jesucristo habia sido formado de la semilla queda, ajada con el soplo mortífero de las almas
de la muger, y que no habia fundado la religion cris aduladoras; y si por intereses, ambicion ó cualesquie—
tiana sino por motivos particulares. Ademas de estos ra otros designios saliese la adulacion de los labios de
errores y algunos otros llenos de blasfemias, suscri quienes están encargados de enseñar, dirigir ó re—
bia á todos los de los anabaptistas. Pratéol, Sponde, prender, entonces el mas digno de los ministerios se
Lindan. convertiria en un fariseismo escandaloso, y en el mas
detestable de los abusos.
Adula eton. Alabanza falsa dada á alguno con
el designio de captar su benevolencia. Es el lazo á que Adulterio, crimen de los que violan la fé con
están mas espuestos los grandes de la tierra, y el ma— yugal. Ordinariamente los jurisconsultos no dan este
yor obstáculó que encuentran para ser sábios y vir nombre sino á la infidelidad de una persona casada;
 ADU 31 ADV
pero los teólogos llaman tambien adulterio al crímen dad: para conservar los cuerpos castos, dice S. Juan
de una persona libre que peca con otra casada; por Crisóstomo, ha tratado de purificar las almas, t. 7,
que uno y otro cooperan á la violacion de la éjurada; Homil. 17 in Matt. Al restablecer el matrimonio en
si los dos son casados, entonces es un doble adulterio. su santidad primitiva, quiso desterrar los desórde
Asi la ley de Moisés que condena á muerte á los nes que le hacen desgraciado.
adúlteros de uno y otro sexo, Levít. c. 20, y . 10. La opinion comun de los teólogos protestantes
Deut. c. 22, y ; 22, no exime de la pena al culpable es que este Divino Maestro permitió el divorcio ó la
no casado: la ley del decálogo que prohibe á todos disolucion del matrimonio, en caso de adulterio;
el desear la mujer del prójimo, no esceptúa á nadie, nosotros probaremos lo contrario en la palabra Di
del mismo modo que la decision dada por Jesucristo, VORCIO.
Mat. c. 5, y ; 28, «que el que mira á una mujer para Ciertos críticos se han escandalizado de que Je
escilar en sí los malos deseos, ha cometido ya, el sucristo no quisiera condenar á la mujer adúltera.
adulterio en su corazon.» S. Pablo se espresa tambien Joan. c. 8, y. 3. Si la hubiese condenado, estos cen
de una manera general al decir que si una mujer, sores temerarios declamarian todavia mas. 1. El
durante la vida de su marido, habita con otro hom Salvador no era juez ni magistrado; tan, solo quiso
bre, será culpable de adulterio. Rom. c. 7, y. 3. practicar estas funciones para reunirá dos herma
La severidad de estas leyes y moral está funda nos que disputaban sobre su herencia. Luc. c. 12,
da evidentemente en el interes de la sociedad. Si y.1.2." Los escribas y fariseos que acusaban á esta
existe un crímen capaz de alterar el órden público mujer, no lo eran; no les guiaba él celo por la ob
y hacer cometer otros delitos, es el de que habla servancia de la ley sino el deseo de tender un lazo
mos. Cuanto mayores son los deberes que impone el al Salvador. Desde el momento que vieron que ha
estado del matrimonio, tanto mas importa el que este hia sido descubierta su hipocresía, se retiraron con
contrato sea sagrado é inviolable. Los derechos de fundidos. 3.º Usando de indulgencia respecto de la
los dos conjuntos son iguales; si los desprecia ó me— acusada, no quitaba á los magistrados el derecho de
noscaba cualquiera de ellos, se hace criminal ante castigarla; si verdaderamente era culpable, á él no
los ojos de Dios y de la religion. Es cierto que la le tocaba el perseguirla hasta su condenacion: ha
infidelidad de la mujer acarrea consecuencias mas bia venido al mundo, no para perder á los pecado
perjudiciales, porque espone á colocar entre su fa— res, sino para salvarlos. ..” Cuando dijo á los acu
milia un hijo adulterino, que usurpará injustamente sadores: aquel que de entre vosotros esté sin pecado,
á los hijos legítimos una párte de su herencia, sien— arroje la primera piedra, no quiso dará entender
do al mismo tiempo una carga mas para el marido; que para juzgar á un criminal es preciso estar sin
pero por otra parte, un marido infiel, cualquiera que pecado; vólvemos á repetir que allí no habia jueces,
sea la persona á que se dedique, hace á su esposa la y que aquella mujer no estaba convicta ni condena
injuria mas sensible y á sus hijos un mal irreparable; da. Si tal hubiera sido el sentido de su respuesta,
no es raro ver algunos padres pérfidos que atienden no habrian callado los escribas y fariseos; pero con
mas á los frutos de su mala conducta que á los de la ella les dió á entender que Jesucristo concia sus
union conyugal. motivos y designio; lo que les cubrió de confusion, é
Cometido una vez este crímen, desaparece la hizo que se retiraran uño despues de otro...
estimacion, la confianza y la ternura mútua de los Esta historia no se encontraba en otro liemp0 en
esposos; el lazo que debia formar su felicidad se nuestros ejemplares del Evangelio de S. Juan; San
hace insoportable. De aqui se originan las divisiones Agustin y otros autores han creido que habia sido
ruidosas, las separaciones escandalosas, las disfama omitida espresamente, por los copistas, que temian
ciones recíprocas y los odios inveterados de las fa— no se dedujesen de ella malas consecuencias , como
milias. ¿A qué escesos no son capaces de llevar los lo hacen en el dia los incrédulos, Prudencia falsa y
celos, la venganza y el furor? ¡Qué ejemplos para que felizmente no ha tenido éxito. Esla narracion
los hijos, que tan sólo debieran encontrar modelos nos hace admirar la sabiduría y la caridad del Sal
de virtud en aquellos de quien han recibido la vida! vador; no puede inspirar á los pecadores una falsa
Qué reconocimiento, qué respeto pueden esperar de confianza, sino únicamente enseñarlos á que se arre
ellos? -

pientan, estando Jesucristo siempre pronto á perdo

Cuando llegan á relajarse las costumbres de una narlos. Es tambien una buena leccion para los ce
nacion, cuando la irreligion, el lujo y el epicureismo losos hipócritas que declaman contra la negligencia
han sofocado todos los sentimientos y pervertido y lenidad de los magistrados, al paso que ellos ms
todos los principios, este desórden no puede me mos no estarian exentos del peligro de ser castigados,
nos de ser general; desaparece la vergüenza y se si las leyes se observaran con rigor.
cierran los ojos á todas las consecuencias. Se arguye
y declama contra la indisolubilidad del matrimonio, Adven miento, se dice de la venida del Ate
sías. Se distinguen dos clases de advenimiento del
y se sostiene la justicia y necesidad del divorcio. Por
qué un crímen ha de dar lugar á otro crímen? EstoMesías; uno que se ha cumplido, cuando el Verbo fue
seria aumentar el mal en lugar de remediarle. V. encarnado, y se presentó entre los hombres revestido,
D. VORCIO. de una carne mortal; el otro futuro, cuando baje vi
Jesucristo, mas sabio que todos estos declamado siblemente del cielo, revestido con toda su glo a y
res, echó mano del único medio eficaz de contenerle, magestad, para juzgar á todos los hombres. .
cerrando todas las avenidas que pueden conducirá Los judiós están siempre esperando el primer ad
él, y condenando el simple deseo de la deshonesti renimiento del Mesías, y los cristianos el segunda
 AL)W 32 AER
que precederá al juicio último. Existe una cuestion Aee la un oa. V. ANoMEos.
entre los comentadores, y es la de saber si Jesucristo Aerianos. Sectarios del siglo cuarto, llamados
habló de este último advenimiento en el Evangelio. asi de Aerio, sacerdote de Armenia su gefe. Los ae—
Matth. c. 2%; Marc. c. 13; Luc. c. 21. Apesar de los rianos pensaban poco mas ó menos acerca de la San
esfuerzos que se han hecho para probarlo en una di— lísima Trinidad, lo mismo que los arrianos; pero te
sertacion que versa sobre este objeto, Biblia de Avi nian adenas algunos dogmas que les eran propios y
ñon l. 13, p. 103, nos parece mas natural el pensar particulares: por ejemplo que el episcopado no es
que tan solo se trata del sitio de Jerusalen y de la un órden diferente del sacerdocio, y que no da á los
ruina y dispersion de la nacion judáica. Interpretan— obispos el poder de ejercer ninguna funcion que no
do de otro modo las palabras de Jesucristo, es pre pueda practicarse por los sacerdotes. Fundaban esta
ciso forzar el sentido de estas palabras: Esta genera opinion en muchos pasages de S. Pablo, y princi
cion no pasará hasta que todo se haya cumplido. Es palmente en el de la primera epístola de Timoteo,
verdad que los santos Padres han sido de opinion, c; , y 14, en la cual el Apóstol le exhorta á no
que los acontecimientos de que habla el Salvador abandonar el don que ha recibido por medio de la
son una figura de lo que debe acontecer en el fin del imposicio de las nanos de los sacerdotes. Sobre lo
mundo; pero ninguno de ellos ha decidido que sea cual observa Aerio que no se trata de los obispos, y
este el sentido literal de los evangelistas. que por este pasage es evidente que Timoteo recibió
la ordenacion por la mano de los sacerdotes.
Adversidad. V. Afliccion. S. Epifanio, Hares. 75, declama con todas sus
Adviento, tiempo consagrado por la Iglesia pa— fuerzas, contra los aerianos á favor de la superiori
ra prepararse á, celebrar dignamente la fiesta del dad de los obispos. Hace ver del modo mas juicioso,
advenimiento ó del nacimiento de Jesucristo, y que que la voz presbiterii, en S. Pablo, encierra las dos
precede inmediatamente á esta festividad. V. NA1 órdenes, de obispos y sacerdotes, todo el senado, la
vinAD. congregacion de todos los eclesiásticos en un mismo
Este tiempo dura cuatro semanas, y empieza el do lugar, y que en semejante asamblea ó reunion era
mingo en que cae S. Andres, ó en el que está mas en donde habia sido ordenado Timoteo. V. Presbíte
próximo á este santo, sea antes ó desples, es decir, RO, OBSPO.

el domingo que cae entre el 27 de noviembre y el 3 Los discípulos de Aerio sostenian tambien, des—
de diciembre inclusives. No ha sucedido asi siempre. pues de su maestro, que las oraciones por los muer—
El rito ambrosiano marca seis semanas para el ad tos eran inútiles; que los ayunos eslablecidos por la
viento, y el sacramentario de S. Gregorio cuenta cin Iglesia principalmente los del miércoles, viernes y los
co. Las capitulares de Carlomagno dicen que se ha— de cuaresma, eran supersticiosos; que mas bien de
cia una cuaresma de cuarenta dias antes de Navidad: bia ayunarse el domingo que no los demas dias, y
esto es lo que se ha llamado en algunos autores an que no debia celebrarse la pascua. Denominaban por
tiguos la cuaresma de S. Martín. Esta abstinencia escarnio anticuarios á los fieles adheridos á las cere—
estaba reducida al principio á tres dias de la sema monias prescritas por la Iglesia y á las tradiciones
na, á saber: lunes, miércoles y viernes, por el pri eclesiásticas. Los arrianos se uniéron á los católicos
mer concilio de Macon. celebrado en 58. Despues, para combatir los delirios de esta secta que no sub
la piedad de los fieles la hizo eslensa á los demas sistió mucho tiempo. Tillemont. Hist. eccles., t. 9,
dias; pero no se observaba constantemente en todas pág. 87. -

las iglesias, ni con la misma regularidad entre los se Como la mayor parte de los errores sostenidos por
glares y clérigos. Entre los griegos no era uniforme Aerio han sido renovados por los protestantes, estos
su uso; unos empezaban el ayuno del adriento desde tienen interes en justificar á este hereje. Dicen que
el 13 de noviembre, otros el 6 de diciembre y otros su principal objeto fue el reducir el cristianismo á
el 20. En Constantinopla mismo, la observancia del su simplicidad primitiva. «Este designio, dice Mos
adviento dependia de la devocion de los particulares, »heim, es sin duda laudable; pero los principios que
que le empezaban, tres, seis, y aun á veces solo ocho » establece y los medios que emplea son muchas ve
dias antes de la Natividad, »ces reprensibles bajo muchos aspectos, y en este ca—
En Inglaterra se cerraban los tribunales de judi »so puede haberse encontrado este reformador.» Hist.
calura durante este tiempo. El rey Juan hizo con es eccles. IV siglo, 2 part. c. 3, S. 21. Asi, segun Mos
te molivo una declaracion espresa, prohibiendo el heim, Aerio no podia tener razon en cuanto á la for
trabajar en los tribunales, durante esta época. In ma, pero sí por lo que respecta al fondo. «Su opinion,
adventu Domini nulla assisa capi debet, y aun en el » dice también, agradó á muchos buenos cristianos,
dia no se permite contraer matrimonio durante el ad » que eslaban cansados de la liranía y arrogancia de
viento sin dispensa. »sus obispos.»
Una particularidad hay que notar respecto del ad Mas nosotros sostenemos que este reformador, muy
viento, y es que contra el uso establecido en el dia, parecido á los del siglo XVI, era reprensible y dig
de llamar primera semana de adriento por la que se no de ser condenado, bajo todos conceptos. 1.° ¿Le
comienza, y que es la mas distante de Navidad, se locaba á un simple sacerdote, sin autoridad y sin mi
denominaba asi á la que se encontraba mas próxi— sion querer reformar las creencias y prácticas de la
ma, contando todas las demas segun este órden há Iglesia universal? Si creia ver innovaciones y abu—
cia atras, del mismo modo que se practica antes de sos en ella, podia hacer represenlaeiones modestas y
la cuaresma con los domingos de septuagésima, sexa respetuosas á los pastores, á quienes incumbia la au
gésima y quincuagésima, etc. toridad; pero rebelarse contra su obispo, relajar á
 AES (83 AFI
sus diocesanos, y separarse de la Iglesia para hacer rientes de mi muger. La afinidad solo se contrae en
se gee de una secta y partido, es una conducta con tre uno de los dos consortes y los parientes; y no los
denada por los apóstoles y que nada puede recusar. aliados de los unos con los otros. Asi, en el ejemplo
2.° El motivo que hacia obrar á Aerio estaba cono propuesto no hay parentesco ninguno entre mi her
cido: eran los celos y envidia respecto de su obispo, mano ó mi hermana y el hermano ó hermana de mi
y el despecho por no haberle preferido para ocupar muger. Por la misma razon no hay tampoco paren
a silla de Sebaste; cualquiera puede convencerse tesco entre los hijos que el marido y la muger hayan
de esto mismo por sus discursos y conducta. 3." Es tenido respectivamente del primer matrimonio antes
te hereje no alacaba abusos introducidos de nuevo, de haber contraido el segundo entre sí; porque, se—
sino usos tan antiguos como el cristanismo. S. Epi gun dicen las leyes, afinis afinem non generat. La
fanio, al refutarle, le opone la tradicion primitiva, significacion de la palabra afinidad corresponde á su
constante y universal de toda la lglesia cristiana, elinología, que viene de la proposicion latina ad y
Ilarres, 75. El querer suprimir ó cambiar estas no de la palabra finis, que significa términos, contines,
ciones y usos no era reducir el cristianismo á su sen límites. Como si se digera que la afinidad confunde
cillez prinitiva sino crear un nuevo cristianismo. los límites que separaban las dos familias para ha
En el siglo IV, era muy fácil saber cuál habia sido cer de ellas solo una, ó á lo menos para unirlas en
el cristianismo desde los apóstoles. .” Una prueba lre sí.
de que los que se adhirieron á Aerio no eran buenos DE LAS DIFERENTES ESPECIEs DE Arixi DAn. El dere—
cristianos es que este herege no admitia la divinidad cho civil no conocia mas afinidad que la que hemos
de Jesucristo; asi es que tanto sus seclarios como él definido ni admilia por consecuencia siño la que
fueron arrojados de todas las iglesias, y se vieron re proviene de un matrimonio legítimo; pero el antiguo
ducidos á vivir en los campos y en los bosques. derecho canónico distinguia muchas especies: la pri
5.° Ninguna secta herética ha dejado de conside mera es la que existe entre uno de los consortes y los
rar á sus pastores legítimos como otros tantos tiranos parientes del segundo; por último, una tercera entre
y orgullosos; pero ningun gefe de secta ha dejado ja uno de los consortes y los parientes de los parientes
más de abrogarse una autoridad mas absoluta y ti. del otro. Pero el concilio de Letrán en 1213 decidió
ránica que la de los obispos; la prueba está en Lu— que no habia mas afinidad que la primera que pro
tero y Calvino. Es mal antecedente que Aereo, uno ujese un verdadero parentesco, y que las otras dos
de sus predecesores, haya sido condenado univer— eran unas miserables sutilezas escolásticas.
salmente como un novador; este ejemplo debiera El derecho canónico actual distingue tres especies
haberles hecho mas prudentes y sábios. V. Nova— de afinidad. La primera que proviene de la union
DORES. de dos familias por un matrimonio legítimo. La se
gunda proviene de la union ilícita entre dos personas
Aesquinas, era un empírico de Atenas que se de diferente sexo. La tercera es de un género espi
guia los errores de los montanistas: enseñaba que los ritual y se contrae entre la persona bautizada y el
apóstoles habian sido inspirados por el Espíritu San padrinó y la madrina entre estos últimos y los padres
lo y no por el Paráclito: que el Paráclito prometido del bautizado y entre las personas que bautiza y el
habia dicho por boca de Montano mas eosas y aun niño bautizado y sus padres.
mas importantes que el Evangelio (1). Para que la afinidad exista por la union lícita ó ilí.
cita de dos personas de diferente sexo es preciso, se
Afinidad parentesco por alianza. En el Diccio— gun el parecer de Santo Tomás, adoptado por todos
nario de jurisprudencia se encontrará la distincion los canonistas que el matrimonio ó la union haya si
de las diferentes especies de afinidad y de los diver do plena y verdaderamente consumada.
sos grados en que es un impedimento dirimente del DE Los EFECTos DE LA AFINIDAD CON RE.ACION AL MA
matrimonio. TRIMONIo. La afinidad no tiene referencia alguna en
AFINIDAD ESPIRITUAL. Especie de alianza que lre nosotros á las sucesiones ni da derecho alguno
contraen en su ahijado los que le sirven de padrino para pretenderlas: el derecho civil la considera re
y madrina en el bautismo; la contraen tambien con el lativamente al orden de erjuiciar y á los impedi
padre y madre del bantizado; asi como el que bau mentos dirimentes del matrimonio: el derechó ca—
tiza se reputa que contrae alianza ó afinidad espiri nónico trata solo de ella relativamente al matrimonio.
1ual con el bautizado lo mismo que con sus padres. No hay grados propiamente en la afinidad como
Es un impedimento para el matrimonio, sobre el cual en el parentesco de consanguinidad; sin embargo,
debe consultarse á los canonistas. V. tambien el ANT1 como los parientes del uno de los consortes están
guo sacRAMENTAlto por Erandeolas, 2." part. p. 23.unidos al otro consorte en el mismo grado de afini
La misma afinidad se contraeria por medio del Sa dal que el del parentesco que los une al primer
cramento de la confirmacion, si estuviera todavia consorte, se cuenta la union de afinidad por los mis
en uso, el tomar para ello padrinos y madrinas. mos grados que la de consanguinidad. Cuando la afi
nidad proviene de un matrimonio legítimo origina
33 Atinidad. (Derecho civil y canónico.) Se lla un impedimento dirimente del matrimonio entre los
ma asi la union y relacion que hay entre una de las parientes en línea recta hasta el infinito, y en línea
personas unidas en matrimonio y los parientes de la colateral hasta el cuarto grado inclusive. Se dice que
otra conjunta. llay union y afinidad entre el herma la prohibicion en línea recta se funda en la ley na,
no ó la hermana de mi muger y yo, porque son pa tural y la pública honestidad; está consignada en el
Yttigius de heer., p. 243. Hufman Laxic. Stock man Lex. Levítico y el Papa no puede dispensar de ella; pero
 AF 3 AFI
fácilmente se dispensa la afinidad de cuarto grado madrina y el niño bautizado, que tienen en la pila un
y frecuentísimamente el segundo en línea colateral: hijo diferente del que contaban tener, y que tam
asi el Papa puede permitir á cualquiera casarse con poco ecsistia entre ¿ y entre el padre y madre del
la hermana de su difunta muger y á la mager ca— hiño, si estos últimos no habian buscado para que
sarse con sus cuñados. Sin embargo , debe haber ra se obligasen á ello á los padrinos y madrinas. Apoya
zones importantes para conceder esta dispensa. su opinion sobre la falta de voluntad que se verifica
En la afinidad producida por una union ilegítima entonces entre el padrino y madrina y el padre y
está prohibido igualmente el matrimonio en línea madre, del niño; opinion que parece mal fundada
recta hasta lo infinilo y en la colateral hasta el se pues de otro modo no habria jamas afinidad en las
gundo grado: esta es la disposicion del concilio de uniones ilícitas. Es preciso atenerse á lo que hemos
Trento adoptada por los concilios provinciales de dicho: tal es el parecer de los mejores canonistas.
Reims y de Burdeos de 1583 y por el acta que el cle Cuando tienen el niño otras personas que las de
ro presentó á Cárlos IX. Pero se debe observar que signadas por padrino y madrina, no contraen nin
el impedimento de afinidad ilícita, no tiene lugar si ¿ afinidad espiritual por este objeto, aun cuando
no en el caso en que el comercio ilícito haya sido co nubieran tenido el niño por procuracion; los que
nocido y público; porque si yo contraigo matrimonio contraen la afinidad son aquellos á quienes se repre
con la hija de una muger á quien he conocido car— senla, porque el que dá su procuracion á otro se
nalmente, y ella ignorase mi comercio, el matrimo juzga que hace él mismo su encargado de procu
nio no se anulará bajo el pretesto de la afinidad que l'dC.0).
hay entre nosotros: esta es la decision de Alejandro El que tiene un niño bautizado ya con agua de so—
III adoptada en Francia; ni esta especie de afinidad corro, y que le presenta á la Iglesia para hacerle
se admite por prueba para obtener la invalidacion suplir las ceremonias del bautismo, no contrae afi
del matrimonio sino cuando el comercio ilicito ha nidad alguna con él ni con su padre ni madre. Lo
sido público. mismo acontece ¿ de un segundo bautismo,
La afinidad que nace de una union ilícita puede cuyo sacramento se hubiere administrado por error.
ser un impedimento dirimente del matrimonio, pero Jamas se niegan las dispensas tocante á la ofini—
no disuelve el que está ya contraido ; asi es, que dad espiritual, y ni aun se la atribuye una gran
cuando un hombre tiene comercio con la hermana ó consideracion en los tribunales del reino: nunca se
hija de su muger, subsiste igualmente su matrimonio; declara nulo un matrimonio contraido entre los que
y tanto el culpable como la parte inocente debe tra— están ligados por esta afinidad; solo puede castigar
tarse maridalmente (1). se la violacion de las leyes de la Iglesia: tampoco se
El concilio de Trento ha restringido el parentesco admite la apelacion como un abuso, interpuesto por
espiritual que produce la administracion del sacra líneas colaterales, de la celebracion de un matri
mento del bautismo, al efecto de producir un im monio, cuyos medios no están apoyados sino sobre la
pedimento al matrimonio entre el bautizado y su pa afinidad espiritual. (Estractado del Diccionario de Ju
drino y madrina, entre el padrino y la madre, la risprudencia).
madrina y el padre del bautizado, entre él y la per
sona que lo bautizó. Asi es que una soltera no Amiccion. Dejarémos á los filósofos las reflexio
puede casarse válidamente con su padrino, ni un nes que la razon puede sugerirnos acerca de la uti
soltero con su madrina; el padrinó no puede ca— lidad de las aflicciones, y de las que nos servimos pa—
sarse con la madre del niño á quien tuvo en la pila, ra responderá las blasfemias de los atéos contra la
ni la madrina con el padre de su ahijado ó ahijada. Providencia y bondad divina. Nos limitaremos á de
La persona que ha bautizado al niño, no puede en mostrar lo que la revelacion nos enseña sobre este
lo sucesivo casarse ni con el niño ni con sus padres. punto.
Hay entre todas estas personas una especie de filia Ya en tiempo de Job , las aflicciones de los justos
cion ó compaternidad,, por la que se considera el eran un motivo de escándalo para los que se tenian
niño bautizado con un hijo adoptivo del que le bau or filósofos. Sus amigos le sostenian que Dios no le
tiza y de sus padrinos; sin embargo, si en un caso ubiera afligido sino fuera pecador; este santo hom
de necesidad un padre bautizase á su hijo, no resul bre les respondia justificando la providencia: es el
taria de esto una aflnidad capaz de anular el matri ejemplo mas antiguo de disputa filosófica que se en
monio. Habiendo ocurrido un caso de esta especie en cuentra en la historia. 1.º Job hace hablar al Se
el siglo IX, el obispo de Limoges juzgó que el mari ñor, para enseñar á los hombres que su conducta y
do debia separarse de su mujer; pero Juan Vll que designios son impenetrables, y que no da cuenta de
entonces ocupaba la Santa Sede, decidió que el obis ellos á nadie. c. 9. y. 38. Nosotros no conocemos ni
po no habia obrado bien. Observaremos aqui que la el interior de los hombres ni lo que Dios hará por
afinidad se contrae en el momento mismo que se ce ellos mas adelante: es pues una temeridad el juzgar
lebra el baulismo, y por la misma celebracion iene de su providencia por el momento presente.
el efecto de producir el parentesco espiritual; de lo 2.º. Sienta como principio que el hombre, nun
que resulta qne el autor de las conferencias de Paris ca está exento de pecado á los ojos de Dios, ibid. y 2.
se ha engañado doblemente cuando ha decidido que Por lo tanto las aflicciones que esperimenta pueden
no habia parentesco espiritual entre el padrino y siempre ser el castigo de sus faltas. 3.° Job sostiene
(1) El culpable no puede pedir licitamente cl débito á la par que Dios indemniza comunmente en este mundo al
te inocente antes de estar habilitado por quien tenga facultades
para ello, pero podra licitamente pagarie cuanto la parte ino . justo afligido cap; 21, 2 y 27; siendo él mismo un
cente se lo pida. ilustre ejemplo. ...” Cuenta con una vida futura.
 AFR (35, AFR

«Aun cuando Dios me quitára la vida, » dice Job, es ron arrojados en tiempo de Justiniano, el año 533.
peraría todavia en él..... Las palancas de mi atahud En el siglo siguiente, la subyugaron los sarracenos
conducirán mi esperanza, descansará conmigo en - ó árabes mahometanos; y desterraron de ella el cris—
tre el polvo de la tumba» c. 13, y 15; c. 17 y 16, tianismo. Véase á Fabricio, Salut. luac Evang. c. ,
Hebr. Despues de haber deplorado la brevedad de p. 702.
la vida del hombre, dice al Señor: «Concededle Para comprender hasta qué punto el cristianismo
pues algunos momentos de reposo, hasta aquel en habia cambiado el genio y caracter de los africanos,
que espera, como el mercenario, el salario de su no hay mas que comparar las costumbres de los an
trabajo» c. 14, y. 6. tiguos cartagineses y las de los berberiscos del dia,
Estas verdades capitales, que eran ya el consuelo con las que reinaban en este mismo clima en tiempo
de los patriarcas, fueron demostradas del modo mas de Tertuliano, de san Cipriano y san Agustin. El
patente por Jesucristo: este lombre Dios es quien, mismo fenómeno se veia en Egipto, y subsiste en el
por sus lecciones y ejemplo, ha dado á conocer á los dia entre los abisinios; es tambien una prueba, de
hombres que es preciso comprar la felicidad eterna ue no existe pais en el mundo, en el que no se pue
por medio de los sufrimientos, y fué tambien quien establecer y conservar el cristianismo, y que la
supo enseñará los justos á dar gracias á Dios en me santidad de esta religion puede triunfar en todos los
dio de las aflicciones. climas.
Por otra parte, la sagrada Escritura nos manifies A la verdad, cuando se fija la atencion en el esce
ta que esta vida no es la mas á propósito para recom so de rigorismo de Tertuliano, en la obstinacion con
pensar la virtud y castigar todos los crímenes., 1.º que los obispos de Africa rehusaron, por espacio de
Obrando de otro modo quitaria á los justos el méri mucho tiempo, reconocer como válido el bautismo
to de la perseverancia y confianza en Dios, dester administrado por los herejes; en las crueldades atro
raria del mundo las virtudes heróicas, y haria al hom ces de los donatistas y de sus circonceliones, en las
bre esclavo y mercenario. No daria á los pecadores costumbres de la mayor parte de sus obispos y en la
el tiempo y los medios de hacer penitencia y corre dureza con que se espresán muchos concilios de aquel
girse. A un ser tan debil é inconstante como es el pais, se ve º en general el carácter africano no
hombre, debe tratársele de esta suerte ? 2.° Muchas guarda medida y casi siempre es estremado. Salvia—
veces una accion que parece laudable ha sido hecha no de provid. l. 8, n. 2, y sig. hace de las costum
por un motivo criminal, y es mas digna de castigo bres de esta parte del mundo un cuadro horroroso; y
que de recompensa; con frecuencia un delito que á sostiene que la irrupcion de los vándalos es un justo
primera vista merece los mayores suplicios, es perdo castigo de los crímenes de los africanos. Segun todos
nable porque se ha cometido por sorpresa, por debi estos antecedentes, pudiera creerse que para conser
lidad o por error, ¿ gana alguna cosa la sociedad en var por mucho tiempo el cristianismo en este pais,
que todos los crímenes secretos se hagan públicos por seria preciso un milagro tan grande como el que Dios
medio de un castigo ruidoso? Quién se atreveria á habia hecho para establecerlo. Sin embargo, subsis
desear para sí mismo esla providencia rigorosa? 3.” tió cerca de seiscientos años, comprendiendo en este
Seria necesario que nuestra vida fuera elerna sobre tiempo todo el siglo que dominó el arrianismo de los
la tierra; aun cuando los trabajos de este mundo pu vándalos: nuestra religion no fué completamente
dieran bastar para castigar todos los crímenes, la destruida hasta el año 709, cuando los mahometanos
felicidad de esta vida es muy imperfecta para recom para acabar de conquistar el Africa, pasaron á cu
pensar la virtud, ..." Solo por medio de milagros chillo todos los cristianos. Hist. de l” acad. des Ins
continuados pudieran los justos verse á cubierto de crip., t. 10, n. 19. p. 206.
los azotes que son universales, é impedir que los pe No obstante, una gran parte de Africa seria en el
cadores prosperasen por su industria y talenlos na dia cristiana, si fuera posible vencer muchos obstácu—
turales. Los que acusan á la Providencia son pues los que se oponen al buen éxito de las misiones. 1."
unos insensatos. En muchas provincias de este vasto continente el
Desde que se estableció por la revelacion, que clima es mortal para los Europeos; á pesar de las
cuando Dios nos alije es por su infinita misericordia, muchas tentativas que se han hecho para establecer
y que por este medió nos purifica en este mundo, á fin en ellas las misiones, tan solo se ha conseguido el que
de perdonarnos y recompensarnos en el otro, estamos mueran los misioneros; como en Madagascar, Con
obligados, sin duda alguna, á bendecirle mas en las go, Loango, Guinea, etc. Era preciso que fuesen na—
aflicciones que en la prosperidad. turales del pais, para establecer en él la religion
cristiana sólidamente. 2." Las relaciones que los mi
Africanos. Africa. No se sahe á punto fijo sioneros europeos se ven obligados á conservar con
cuál de los apóstoles ó sus discípulos predicó primero la nacion que los pretege, los hacen sospechosos á los
la religion cristiana en las costas del Africa. Algu africanos, que temen mucho el genio conquistador, la
nos autores escribieron que fué el apóstol san Simon; ambicion, la rapacidad y el tono imperioso de las
otros sostienen que el cristianismo no se estableció naciones europeas. 3." La política detestable de es—
en esta parte del mundo hasta el año 120 de nues las ha sido muchas veces causa de que se desgracia
tra era, poco mas ó menos. Debió de hacer en poco ran las misiones; porque si los africanos abrazaran
tiempo grandes progresos, pues que en el siglo V el cristianismo no venderian á sus compatriotas, y
se contaban mas de cuatrocientos obispos. Los ván no habria negros para cultivar las colonias de la
dalos, que por aquella época se hicieron dueños del América. 4." El carácter de la mayor parte de es
Africa, lº en ella el arrianismo; pero fue tos pueblos meridionales es en estremo ligero y muy
 AFT 36 AGA
semejante al de los niños; son muy sensibles al me Agapes, del griego AGAPE, amor: comida de ca
nor interés temporal; renuncian ála religion con la ridad, que hacian entre sí los primeros cristianos en
misma facilidad que la abrazan, cuando encuentran sus reuniones para cimentar la concordia y union
en ello alguna ventaja. Estado presente de la religion entre los ¿ del mismo cuerpo, y para resta
etc. pág. 222 y sig. blecer por lo menos al pie de los altares la fraterni
Mosheim que no ha dejado despreciar la menor dad destruida en la sociedad civil por la desigualdad
ocasion para denigrar los irabajos y éxito de los mi de las condiciones.
sioneros católicos, se ha visto obligado á hacer justi— Al principio, estos agapes se hacian sin desórden
cia al celo heróico, con el cual los capuchinos se en ni escándalo; asi lo prueba lo que san Pablo escribió
tregaron á las misiones del Africa. Hist. ecles. 17.” á los Corintios, Epist 1.” c. 11. Los paganos que no
siglo, secta 1.º, S 18. conocian ni la política ni el objeto de ellos, tomaron
ocasion para hacer á los primeros fieles los reproches
Aft hartodo ectas. V. 1NCORRUPTIBLEs. mas odiosos. Decian que degollaban á sus hijos y co
mian su carne, y que se entregaban á la impudicidad
Agag, rey de los amalecitas. Saul, vencedor de en las tinieblas; el pueblo, siempre demasiado crédu
este rey, le habia perdonado contra la órden espre lo, dió é á todas estas calumnias; mas Plinio, mejor
sa del Señor; Samuel indignado le hizo matar delan informado, hizo una relacion á Trajano, y le aseguró
te del tabernáculo. L. Reg. c. 15, y 33. se reprocha que en los agapes todo respiraba inocencia y fruga
á Samuel esta muerte, no solo como un acto de cruel— lidad.
dad, sino como un sacrificio de sangre humana ofre El emperador Juliano, aunque enemigo declarado
cido á Dios. de los cristianos, convenia en que su caridad para
En aquella sazon no se tralaba de un sacrificio, con los pobres, sus agapes y el cuidado que sus sacer
sino de ejecutar la órden de Dios, y tratará un ene dotes tenian por los miserables ó enfermos eran uno
migo con todo el rigor que dá de sí el derecho de la de los principales atractivos por los cuales se deci
guerra, tal como se conocia y estaba puesto en prác dian los paganos á abrazar su religion. 0bras de Ju—
tica entonces. Lejos de obrar y movido por un impul liano, edic, de Spantheim. p. 305.
so de crueldad, Samuel quiso castigar á Agag por Los pastores con el objeto de desterrar hasta el
las que habia cometido. «De la misma manera le di menor pretesto de licencia prohibieron que el beso de
» ce, que tu espada ha privado á las madres de sus paz, que se daban al reunirse, tuviera lugar entre
» hijos, asi tu madre se verá privada de tí.» Saul personas de diferente sexo, y que se pusieran camas
mismo reconoció que habia obrado mal perdonando á en las iglesias para comer con mas comodidad; mas
Agag. ibid. y 30. otros abusos hicieron que se suprimieran poco á poco
Mas los incrédulos formulan contra Samuel una
los agapes. San Ambrosio trabajó para esto con lan
acusacion mas grave, diciendo que fué causa de ta eficacia, que en la Iglesia de Milan cesó su uso
aquella guerra; nada les parece mas injusto que el completamente. En la de Africa no subsistió mas que
haber inducido á Saul á esterminar completamente entre los clérigos, y para ejercer la hospitalidad res
los amalecitas bajc el pretesto de que cuatrocientos pecto de los estrangeros; despues de grandes obstá
años antes sus predecesores habian negado á los is culos, san Agustin llegó á suprimir en Hipona la cos
raelitas á su salida de Egipto, el paso por sus tierras. lumbre de comer en la iglesia, abuso que habia sido
Era este todo el crímen de los amalecitas? No solo prohibido en el concilio de Laodicea, cán. 18; se vió
les habian rehusado el paso, sino que ademas caye obligado á tomar muchas precauciones, y á usar de
ron sobre los israelitas que quedaban rezagados, todas las contemplaciones posibles Mcm, de Tillem.,
abrumados de hambre y cansancio, y los mataron tom. 13, p. 206.
sin razon v sin temor de Dios. Por esto Dios dió á los Entre los sábios se han originado diferentes contes
israelitas la órden siguiente: «Cuando el Señor os taciones, con el objeto de averiguar si la comunion de
» haya dado el reposo en la tierra que os ha prometi la Eucaristía se hacia antes ó despues de la comida
» do, esterminareis debajo del cielo el nombre de de los agapes; parece que en su origen era despues,
» Amalec.» Deuter. c. 25, y 17. Esta misma órden á fin de imitar con mas exactitud la accion de Jesu
habia sido dada en el momento en que los amalecitas cristo, que no instituyó la Eucaristía, ni dió de co
vinieron á atacar á los israelitas. Earod. c. 17, y 8 mulgar á sus apóstoles sino despues de la cena que
y 1. En la época de los jueces se unieron dos veces acababa de hacer con ellos. No obstante, conocien
á los m0abitas y á los madianitas para entrar á san do despues que era mejor recibir la Eucaristía en
gre y fuego por las posesiones de los israelitas. Jud. ayunas, parece que se establecio este uso desde el si
c. , y 13, c. 6, y 3. Por consiguiente tenian bien glo segundo; pero al ordenarlo asi en el tercer con:
merecida la venganza que se ejerció contra ellos, y cilio de Cartago, exceptuó el Jueves Santo, en el cual
Samuel estaba en su derecho al exijir que se ejecuta se continuó practicando los agapes antes de la comu
ra con todo rigor la órden del Señor. nion. De todo esto se deduce que la disciplina acer
Mas por qué, dicen nuestros censores, esterminar, no ca de este punto, no fué uniforme en todas parles.
solo á los hombres sino tambien á los animales? Por Bingham. Orig. Eccles, l. 15, c. 7, S7.
que Dios lo habia mandado asi, porque los amaceli Algunos autores pretenden que estos agapes eran
las obraron del mismo modo respecto de los israeli una costumbre tomada de los paganos; es una de las
tas. Jud. c. 6 y ; y porque salvando el ganado, se cosas que vitupera Fausto el maniqueo.
hubiera creido que los israelitas obraban por avari No consideran que los judios tenian por costumbre
cia, y no por obedecer á Dios. el comer las víctimas que inmolaban al verdadero
 AGA AG.A

Dios, y que en estas ocasiones reunian á sus parien Epístolas, asegura á las vírgenes de su época, que la
tes y amigos. El cristianismo que se levantó de entre Iglesia no podia permitir no solo el verlas habilar ba
ellos, tomó de ellos este uso indiferente en sí mismo, jo el mismo techo que los hombres, sino ni aun co—
¿? bueno y laudable por el motivo que le dirigia. mer á la misma mesa; el mismo santo Obispo dice,
os primeros fieles, que al principio eran pocos, se ue uno de sus cólegas acababa de excomulgar á un
consideraban como una misma familia de hermanos, iácono por haber habitado muchas veces en compa
y vivian en comunidad: el espíritu de caridad insti ñia de una virgen; felicita á este prelado por seme
tuyó estas comidas, en las que reinaba la templanza, y jante determinacion, como un rasgo digno de la pru
¿ aumentado el número de los fieles des dencia y firmeza episcopal; por último, los Padres del
pues, trataron de conservar este uso de los primeros concilio de Nicea, prohiben espresamente á todos los
tiempos; pero comenzaron á introducirse abusos, y eclesiásticos el tener consigo las mugeres que se lla—
la Iglesia se vió obligada á prohibirlo. maban subintroductae, á no ser que fueran su madre,
S. Gregorio el Grande permitió á los ingleses re su hermana, ó su tia por parte de padre, respecto de
cientemente convertidos, los festines hechos bajo al las cuales, dicen, seria un horror el creer que los mi
gunas tiendas ó árboles en el dia de la dedicacion de nistros del Señor fuesen capaces de violar los dere—
sus iglesias ó de las fiestas de los mártires, en la pro— chos de la naturaleza.
ximidad de las iglesias, pero no en su recinto. Se en— Por esta doctrina de los Padres, y por las precau
cuentran tambien algunos vestigios de los agapes en ciones tomadas por el concilio de Nicea, es probable
el uso establecido en muchas iglesias catedrales ó co que el trato de las agapetas y de los eclesiásticos ha
legiatas, que consiste en hacer el Jueves Santo, des— bria ocasionado desórdenes y escándalos. Esto es lo
pues del lavatorio de pies y de los altares, una cola que parece dá á entender S.Gerónimo, cuando pre
cion en la sala capitular, la sacristia y aun en la igle gunta como indignado: Unde agapetarum pestis in
sia. S. Gregorio, Ep. 71, l. 9. Baronius, ad ann. J7, Ecclesiam introivit? Con este mismo objeto escribió
377.38%; Fleury Hist. eccles, t. 1 p. 64, l. 1. S., Juan Crisóstomo, despues de su promocion á la
silla de Constantinopla, des pequeños tratados sobre
Agapetas. Eran en la primitiva Iglesia unas vír el peligro de semejantes compañías; por último, el
genes que vivian en comunidad, y servian á los ecle concilio general de Letran, bajo el pontificado de
siásticos por puro motivo de piedad y caridad. Esta Inocencio III, en 1139, las abolió completamente.
palabra significa muy-amada, y como la anterior se Los protestantes y todos aquellos que han escrito
deriva del griego. contra el celibato de los clérigos han preconizado
En el primer fervor de la Iglesia naciente, estas mucho los escándalos que se originaron del trato de
sociedades piadosas, lejos de tener nada de criminal, las agapetas con los eclesiásticos; al oirlos, no parece
eran necesarias bajo muchos aspectos. El pequeño sino que este abuso era muy comun, que las leyes
número de vírgenes que formaban con la Madre del de la Iglesia no fueron suficientes para desarraigar—
Salvador, parte de la Iglesia, y de las cuales la ma— le, y que fue preciso recurrir á la autoridad de los
yor parte eran parientes de Jesucristo ó de sus após emperadores; han repetido mas de veinte veces las
toles, vivieron en comun con ellos, asi como con to palabras de S. Gerónimo que acabamos de citar.
dos los demas fieles. Lo mismo acontecia con las que Con estas exageraciones ridículas se engaña á los
algunos apóstoles tomaron consigo para ir á predicar lectores. 1.” Estos declamadores no fijan la atencion,
el Evangelio á las naciones; prescindiendo de que lo en que el trato de que hablamos tuvo lugar antes
maS probable seria que fueran sus mas próximos pa
de que existiera una ley general del celibato para los
rientes, y ademas de una edad y virtud que no die— eclesiásticos; esta ley no fue tampoco dada en el con
ran motivo para ninguna sospecha, no las tenian á su cilio de Nicea, que prohibió á los clérigos promovi
lado sino por el mismo interés del Evangelio, á fin dos á las órdenes sagradas el retener con ellos perso
de poder por su medio, como dice S. Clemente de Ale nas que no fueran sus mas próximos parientes; no
jandria, introducir la fé en ciertas casas, cuyo acceso fue, pues, la ley del celibato la que dió lugar á su
no era permitido mas que á las mugeres. Todo el mun compañia con las agapetas ó mugeres introducidas.
do sabe que entre los griegos su habitacion estaba se 2.º Todos los egemplos que han podido citar de este
parada, y que rara vez se comunicaban con los hom escándalo se reducen á dos ó tres; el de Pablo de Sa
bres de afuera: lo mismo puede decirse de las vírge mosála, que tenia consigo dos jóvenes, y fue una de
nes, cuyo padre era promovido á las órdenes sagra las causas de su deposicion; y el de los dos diáconos
das, como de las cuatro hijas de S. Felipe, diácono, y de que habla S.Cipriano en sus cartas, y que fueron
otras muchas. Pero aun prescindiendo de estos casos escomulgados por su obispo. Estos castigos egem
privilegiados y de necesidad, no parece que la Igle lares no eran los mas á propósito para persuadir á
sia haya permitido jamás que las vírgenes, bajo nin os clérigos que podian escandalizar impunemente.
gun concepto, vivieran con eclesiásticos, á no ser que Los demas escándalos con que S.Cipriano vitupera
estuvieran unidos por medio de un parentesco muy ba á las vírgenes no atañian á los eclesiásticos; por
próximo. Por sus mas antiguos monumentos vemos, lo menos nada se encuentra en sus espresiones que lo
que siempre ha prohibido esta clase de compañias. pruebe. 3." Aun cuando no hubiera acontecido en
Tertuliano, en su libro sobre el velo de las vírgenes, toda la Iglesia mas que un solo escándalo de esta
pinta su estado como un contrato indispensable para clase en el espacio de cincuenta años, seria suficiente
vivir de modo que no estén al alcance de las miradas para dar lugar á poner en práctica las leyes que se
de los hombres; y con mas razon para huir de toda han hecho para prevenirlos, ya por los concilios, ya
cohabitacion con ellos. S. Cipriano en una de sus por los emperadores; y de esto no se deduce que hā
TOMO 1. -
1.
 AGA 38 A GN

ya sido comun el desórden. ¿No sucede todos los dias al advenimiento de Jesucristo todo el Oriente es
que la menor sospecha respecto de la conducta de un taba persuadido de que un personage salido de la
eclesiástico conocido basta para meler mucho ruido Judea seria el Señor de todo el mundo. En la ve
y hacer hablar á todo el mundo? ..” Cuando S. Ge. nida del Salvador, el cielo, la tierra y el mar se es
rónimo ha declamado contra los hereges, y les ha tremecieron por los prodigios que presenciaron; el
echado en cara sus desórdenes, nuestros adversa— concierto de los ángeles, que anunció su nacimien
rios le miran como á un declamador , y no le dan to, la estrella que lo indicó á los magos, el cielo
ningun crédito; y en esta cuestion, porque se opone abierto en su bautismo, las tinieblas que cubrieron
con todas sus fuerzas á las costumbres de los ecle á la Judea en su muerte, su ascension y la venida
siásticos de su época, sacan sus argumentos de sus del Espíritu Santo, fueron otros tantos prodigios obra
espresiones, como si fueran palabras sacramentales. dos en el cielo; calmó las tempestades, y llenó de
Ilé aqui cómo han tratado la historia eclesiástica los admiracion á toda la Judea con sus milagros. Antes
¿ y sus discípulos los incrédulos; un solo de su nacimiento, las guerras de los judios contra
echo desventajoso para el clero que puedan citar los reyes de Siria, y despues de su muerte, la con
ellos un triunfo : y veinte egemplos de vir quista de la Judea por los romanos, pusieron en mo
lud no les parece que deben llamar la atencion. vimiento á todos los pueblos. El segundo templo era
El nombre de agapetas se dió tambien hácia el menos rico que el primero; pero estaba santificado y
año 395 á una secta de gnósticos, que se componia honrado con la presencia del Mesias, que obró en él
principalmente de mujeres. Estas se introducian muchos milagros, y predicó el Evangelio de la paz.
con los jóvenes, y les enseñaban que nada habia de Los autores del Talmud entendieron del mismo
impuro para las conciencias puras. Una de sus mác modo que nosotros esta profecia del advenimiento
simas era «el de jurar y perjurar sin escrúpulo, mas del Mesias. Galatin., lib. 8, c. 9.
»bien que revelar los secretos de la secta.» La misma
doctrina ha reinado siempre entre todos los hereges Agiógrafo. V. HAGloGRAFo. -

desenfrenados. S. Agust. Har. 70. Agiomitas ó Agioneses. Es una secta de

Es preciso no confundir las agapetas con las dia los desenfrenados que condenaban el matrimonio y
conisas. V. DIACONISA. la castidad, el que consideraban como una sugestion
del príncipe malo; se entregaban á toda clase de in
Agarenianos. Asi se llamaron los cristia famias: aparecieron hácia el año 69 bajo el reina
nos que, á mediados del siglo VII, renunciaron al do de Justiniano II y el pontificado de Sergio I. Fue
Evangelio para profesar el Alcoran; negaban la Tri ron condenados por el concilio de Gangres. Slock
nidad, y pretendian que Dios no habia tenido hijo man Leaceic.
porque tampoco habia tenido muger. s
Estos cristianos apóstatas se denominaron agare— Agnoetas, ó Agnolitas, secta de hereges que
nianos porque abrazaron la religion de Mahoma y de seguian la doctrina errónea de Teofrono de Capado
los árabes, que descienden de Ismael, hijo de Agar. cia, el cual impugnaba la ciencia de Dios sobre las
Stokman Leareic. cosas futuras, presentes y pasadas. Los eunomia
nos, no pudiendo permitir este error, le arrojaron
Ageo, el décimo de los doce profetas menores: de su comunion, y se hizo gefe de una secta á la que
uació durante la cautividad de los judios en Babilo— dió el nombre de eunomisfronianos. Sócrates, Sozo
nia; y á su vuelta exhortó vivamente á Zorobabel, méno y Niceforo que hablan de estos hereges, aña
príncipe de Judá, al gran sacerdote Jesus, hijo de den que cambiaron tambien la forma del bautismo
Josedech, y á todo el pueblo, al restablecimiento del usada en la Iglesia, no bautizando en nombre de la
templo ; les vituperó su negligencia con respecto á Santísima Trinidad, sino en el de la muerte de Je
esto, y les prometió que Dios haria un segundo tem sucristo. Esta secta tomó el origen bajo el imperio de
plo mas ilustre y glorioso que el primero, no por la Valente, hácia el año 370 de nuestra era.
abundancia del oro y de la plata, sino por la presen
cia del Mesias, c. 2, y. 7 y sig. Agno itas ó Agnoetas, secta de eutiquia
Esta profecia es formal; no pueden estar mas cla nos, cuyo autor fue Temischius en el siglo VI. Sos
ros los términos. «Todavia un poco mas tiempo, y tenia que Jesucristo en cuanto hombre ignoraba
»yo haré estremecer el cielo, la tierra, el mar y to ciertas cosas, y especialmente el dia del juicio último.
» do el universo; pondré en movimiento á todos los Esta palabra viene del griego AGNOETEs, ignoran
» pueblos, y el deseado de todas las naciones vendrá. te, derivado de AGNoEIN, ignorar.
» Yo llenaré asi de gloria esta casa, dice el Señor de Eulogio, patriarca de Alejandria, que escribió con
»los ejércitos: el oro y la plata son para mí; pero la tra los agnoitas á fines del siglo VI, atribuye este er
»gloria de esta casa será mayor que la de la primera, ror á algunos solitarios que habitaban en las cerca—
» y yo daré la paz en este lugar.» nias de Jerusalen, y que, para defenderlo, alega
El deseado de todas las naciones no puede ser otro ban diferentes testos del nuevo Testamento, y entre
mas que el Mesias; segun la profecia de Jacob, de otros el de S. Marcos, c. 13, y.32, que dice, «que nin
bia reunirá las naciones; segun las promesas hechas gun hombre sobre la tierra sabe ni el dia ni la hora
á Abrahan, todas las naciones de la tierra debian del juicio último, ni los ángeles que están en el cie—
ser bendecidas en él; segun las predicciones de Isaías, lo, ni aun el Hijo, sino solo el Padre.» Los socinianos
»las naciones esperarán en él, y las islas aguardarán se sirven tambien de este pasage para impugnar la
»su ley, etc.» Jacilo, Suetonio y Josefo nos enseñan que divinidad de Jesucristo.
 AGN 39 AG0
Los teólogos católicos responden, 1.” que en San cia y los distribuia al pueblo. Tal es el origen de los
Marcos, no se trata del juicío último sino del dia en Agnus Dei, que los Papas han bendecido despues con
que Jesucristo debia venir á castigar la nacion judái mas ceremonias. El sacristan los prepara mucho tiem
ca por medio del filo de las espadas de los romanos; po antes de la bendicion. El Papa, revestido de pon
2.º que Jesucristo, aun en cuanto hombre, no igno tifical, los moja en agua bendita y sacándolos des
raba el dia del juicio final, pues que habia predicho pues los bendice. Se meten en una caja que un sub
la hora; Luc. c. 17, y 31, el lugar, Matth. c. 24. diácono lleva al Papa, en la misa despues del Agnus
y 28; las señales y las causas, Luc. c. 21, y 25. sino Dei, y se los presenta repitiendo tres veces estas pa—
que por estas palabras queria el Salvador reprimir labras: A qui estan los jóvenes corderos que os han
la curiosidad indiscreta de sus discípulos; dándoles anunciado la aleluya; he aqui que vienen á la fuente
á entender que no era la ocasion oportuna para re llenos de caridad, aleluya. En seguida el Santo Pa
velarles este secreto. Su respuesta tiene el mismo dre los distribuye entre los cardenales, obispos, pre
sentido que la de un padre que dice á un hijo dema lados, etc.
siado curioso: yo no sé nada de eso. Se cree que no los pueden tocar mas que los que
Asilo entendieron S. Basilio, S. Agustin y otros Pa tienen órdenes sagradas; esta es la razon porque los
dres de la Iglesia. cubren de telas muy finas y bien trabajadas, para
Efectivamente, Jesncrito dice de sí mismo, darlos á los seglares. Algunos escritores dan de esto
Joann. c. 12, y 49: «Yo no hablo por mí mismo, yo muchas razones místicas y les atribuyen muchos efec—
» no digo sino lo que me ha sido ordenado por mi Pa tos. Véanse el órden ltomano, Amalarius, Valafrid,
»dre que me ha enviado.». Y responde á otra pre Strabon, Sirmond en sus Notas sobre Ennodius, Teo
gunta que le hacian sus apóstoles. Act. c. 1. y 7: filo Raynaud, etc.
»No os toca á vosotros el conocer los tiempos ni los
» momentos que el Padre tiene en su poder.» S. Pa AGNUS DEI. Parte de la liturgia de la Iglesia
blo dice tambien que en Jesucristo se encuentran romana ó súplica de la misma entre el pater noster y
ocultos todos los tesoros de la sabiduría y de la cien— la comunion. Es el lugar de la misma en que el sacer
cia. Coloss. c. 2, y 3. dote dándose tres golpes de pecho repite otras lantas
Los agnoetas objelaban, lo mismo que los arrianos, veces en voz inteligible: Cordero de Dios que quitas
el pasage del Evangelio segun S. Lucas, c. 2, y 52, los pecados del mundo, tened piedad de nosotros. Es
en el que se dice que Jesus crecia en sabiduría, en una profesion de fe de la universalidad de la reden
edad y en gracia, delante de Dios y de los hombres. cion, que está sacada del Evangelio. Joann. c. 1.
Los Padres respondian que esto debe entenderse á lo y. 29. Ya habia dicho Isaias en el mismo sentido.
mas de las apariencias esteriores, pues que S. Juan c. 53, y 6. «todos andamos estraviados como ove
dice en su evangelio, c. 1, y. 1 : «Nosotros hemos »jas..... y Dios ha tomado sobre sí la iniquidad de to
» visto su gloria, tal como conviene al Hijo único del »dos nosotros.» Lebrun, eaplic. de la cerem. Tom. 11.
» Padre, lleno de gracia y de verdad, y por consi pag. 577.
sº de ciencia y sabiduría». Petaü de Incarn.
. 11, c. 2. Agobardo. Arzobispo de Lion en el siglo nono:
Tanto por esta disputa como por las demas, es evi se encuentra entre el número de los escritores ecle
dente que nunca podria terminarse ninguna cuestion siásticos. Probó contra Felix de Urgel, que Jesu
con los hereges, si nos tuviéramos que atener á la Es críto es no solo Hijo de Dios por adopcion sino tam
critura sola; es necesario acudir á la tradicion para bien por naturaleza; escribió contra los duelos, los
conocer su verdadero sentido. Asi muchos protestan experimentos supersticiosos del fuego y del agua, el
tes han caido en el mismo error que los socinianos, abuso de los bienes eclesiásticos y contra muchos er
con respecto á la ciencia de Jesucristo. Nota de Feaur rores populares. Falleció en 80. La mejor edicion
den sobre S. Ireneo, l. 2, c. 9. de sus obras es la de Baluze, hecha en 1666 en 2
vol. en l." Los protestantes han querido colocar á
Agnus Dei. Asi se llaman unos panes de cera este arzobispo en el número de los que llaman testi
de la forma de un cordero llevando el estandarte de gos de la verdad, porque atacó las supersticiones de
la cruz, y que el Santo Padre bendice solemnemen su siglo; prueba frívola y ¿ no merece la menor
te el domingo in albis despues de su consagracion, y atencion. Basnage quiso tambien hacer dudar de la fe
mas adelante cada siete años para distribuirlos al de Agobardo respecto á la Eucaristía ; mas es cons
pueblo. tante que este escritor ha profesado formalmente la
El origen de esta ceremonia viene de una costum— creencia de la Iglesia sobre este punto en muchos pa
bre antigua en la Iglesia Romana. En otro tiempo se sages de sus obras.
tomaba el domingo in albis el resto del cirio pascual
bendecido en el sábado santo, y se repartia entre el Agonía, Agonizante. Este término lie
pueblo á pedazos. Cada uno despues los quemaba en ne su orígen en la voz griega AGoN, que significa
su casa, en los campos, en las viñas etc., como un combate. Los que critican á la religion cristiana han
preservativo contra las asechanzas del demonio y llevado su prevencion hasta el punto de imputar co
contra las tempestades y huracanes. Esto se practica mo un crímen á la Iglesia católica la caridad que ma
ba tambien fuera de Roma; pero en la ciudad el ar— nifiesta á los fieles próximos á la muerte, asi como
cediano en lugar del cirio pascual tomaba cualquie tambien los socorros espirituales que se esfuerza en
ra otra cera, sobre la cual derramaba aceite, hacia de proporcionarlos: dijeron que es una crueldad hacer
ella varios trozos en la forma de cordero, los bende contemplará un móribundo su próximo fin y colocar
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con anticipacion á su visla una parte del aparato,de trina, y á quienes consideraban como otros tantos
su pompa fúnebre. Esta reflexion por parte suya de combatientes propios para conquistar discípulos. Se
muestra sin duda que este último momento es terri los llamaban ademas, circuidores, circeliones, circon
ble para ellos; pero no lo es para un cristiano que celiones, catropitas, coropitas, y en Roma montenses.
cree en Dios, que espera en Jesucristo y que aguar La historia eclesiástica refiere la multitud de violen
da con confianza una vida eterna. Las cofradias de cias que empleaban contra los católicos. V. CIRcoN
los agonizantes ; las oraciones que se rezan, las que CELIONES, D0NATISTAS, ETC.
se dicen al lado del enfermo, los últimos Sacramen
tos, le sirven de consuelo; él mismo los solicita y se Agonic litas Hereges del octavo siglo, quienes
tranquiliza á beneficio de la intercesion de la Iglesia tenian por máxima no orar jamas de rodillas sino de
v los votos de sus hermanos los considera como la pie. Esta voz es compuesta de A, privativa, de GoNu,
última prueba de amistad que pueden darle;. Un pa rodilla y del verbo KLINo, inclinar, doblar, encorvar.
dre que bendice á sus hijos reunidos, arrodillados y
derramando lágrimas, es ciertamente un grande es— A gua. En la sagrada Escritura se toman frecuen
pectáculo. Frecuentemente ha contribuido á que se temente las aguas en un sentido metafórico y dos sig
reconozcan algunos pecadores que seguramente no nificaciones opuestas. 1.° Las aguas designan algu—
estaban dispuestos de nodo alguno; y si el filósofo nas veces los beneficios de Dios. Núm. c. 2 y 7.
mas intrépido tuviera este objeto de tiempo en tiem, Las aguas fluirán de su vaso, esto es, tendrá una
po ante sus ojos, hallaría quizá la mejor respuesta á posteridad numerosa. Cuando se dice del agua que
todas sus objeciones. -
refresca y apaga la sed se toma por el símbolo de los
consuelos divinos. Salmo 22, y . 2, etc. Jesucristo lla
AGONIA DE JESUCRISTO. Algunos momentos ma á su doctrina y á su gracia una agua viva, por
antes de que Jesucristo fuera preso, por los judios, que produce en nuestras almas el mismo efecto que
orando en el monte Olivete, cayó en debilidad y en la el agua cuando fecundiza la tierra.
agonia; rogó encarecidamente á su eterno Padre que 2.” En un sentido contrario, como cuando se com
alejase desí el caliz de la amargura, y sudó sangre y paran los castigos producidos por la cólera del Señor
agua. Celso sobre Orígenes, libro 2.” n. 23: los judios á las aguas desbordadas que arruinan una comarca.
en el munimen fidei, secc. partic, cap. 2 : los incré Sam. 17, y. 17, el Señor me ha sacado de un abismo
dulos modernos han insistido á porfia sobre esta cir
de agua; es decir, de las desgracias que habian caido
cunstancia. «El hombre-Dios, dicen, en los momen sobre mí. En el estilo profético, las aguas designan
»tos próximos á su muerte, manifestó una debilidad algunas veces un egército enemigo pronto á derra—
»de que se habria avergonzado un hombre de ánimo marse como un torrente ó un rio desbordado, y á des
» esforzado en semejante caso.» - truirlo todo á su paso, Isaias c. 8, y.7.
Les rogamos encarecidamente que, consideren, 1.º Se refiere en la historia de la creacion, Gén. c. 1.
que Jesucristo habia predicho mas de una vez á sus y. 6. que Dios hizo un firmamento para dividir las
discípulos su pasion y muerte, puesto que acababa aguas; que separó las que estaban encima del firma
de hablarles sobre este punto despues de la última mento de las que estaban debajo, y que llamó cielo á.
cena, llamando á sus padecimientos el momento de este firmamento. De aqui han tomado ocasion algu
su gloria; y habia anunciado constantemente su re nos incrédulos para decir que Moisés y los hebreos
surreccion 2." Podia muy bien haber burlado el de concebian el cielo como una bóveda sólida sobre la
signio de Judas y de los judios; si hubiera querido pa que descansan las aguas, y que hay abertura en esta
sar la noche en otro sitio, si se hubiera alejado á bóveda para dejar caer las aguas en lluvia. Esto es
gran distancia de Jerusalen, sus enemigos no habrian suponer un ridículo donde no existe. En la voz cielo
conseguido su objeto. Al momento en que sabe su observaremos que la palabra hebrea, tomada por
aproximacion, se levanta, avisa á sus discípulos, par firmamento, significa solamente una extension; por
té al encuentró de los soldados, se presenta á ellos con consiguiente Moisés dijo sencillamente que Dios ha
aire intrépido, y les derriba por tierra con una sola bia hecho un espacio muy estenso para dividir las
palabra, haciéndolesconocer que es árbitro para es aguas que estan en los mares y los rios, de las que
terminartos ó ponerse en sus manos. . -
estan convertidas en vapor y que permanecen sus
Jesucristo por medio de su Agonía, quiso enseñar pensas en la atmósfera; en lo que nada se opone á las
nos que la repugnancia natural de sufrir y morir no reglas defísica.
es un crimen, siempre que esté unida á una perfecta Leemos en el Evangelio, Math. c. 1, Marc. c. 6.
sumision á Dios. Quiso instruir á los mártires, y ma Joan. c. 6, que Jesucristo anduvo sobre las aguas del
nifestarles que se debe desear la muerte, mas no pro lago de Genezareth, é hizo caminar á S. Pedro: que
vocarla. Por último concluyó su súplica con estas pa este milagro causó la mas estupenda admiracion á sus
labras: Padre mio, hágase cuestra voluntad y no la discípulos, y los convenció de la divinidad de su
mia. Un filósofo moderno conviene en que es una Maestro. Para reducir á la nada este milagro, ha dicho
prueba de valor escesivo caminará la muerte temién cierto crítico que probablemente los discípulos vieron
dola. V. Disertacion sobre el sudor de sangre, etc. Bi sola la sombra de Jesus al lado de su barca, y que el
blia de Ariñon. t. 13, p. 68. pavor de que estaban poseidos les hizo creer que ca—
minaba sobre las aguas.
Agonásticos. Nombre con que Donato y los Mas si Jesucristo no hubiera caminado realmente,
donalistas designaban á los predicadores que envia no habria podido hallarse en aquel mismo instante
ban á los pueblos y campiñas para propagar su doc cerca de sus discípulos, sino que hubiera permaneci
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do al otro lado del lago, ínterin ellos se embarcaban bendita es de tradicion apostólica, y que se ha con
para atravesarle, Este prodigio se efectu0 hácia la servado entre los orientales, separados de la Iglesia
cuarta vigilia de la noche , esto es, al amanecer, en romana hace mas de mil y doscientos años.
cuyo tiempo no se ve la sombra de ningun cuerpo. Se ha creido necesario este uso especialmente en
No fue el espanto el que se apoderó de los discípulos los primeros siglos, en que la mágia, los sortilegios
sino la admiracion, pues S. Pedro dijo á su Maestro: y demas supersticiones del paganismo habian fasci
Señor, si sois vos, mandad que camine sobre las aguas nado todos los entendimientos. El cristiano que se
hasta donde vos estais; y con efecto caminó y llegó so servia del agua bendita santificada por la Iglesia,
bre la palabra de Jesucristo. No es pues posible que promelia por este signo renunciar á todos estos ab—
este apóstol soñase que caminaba sobre las aguas, que surdos y desecharlos como injuriosos á Dios. No con—
temía sumergirse, que Jesucristo le alargó la mano y cebimos cómo pueden llamar los protestantes y sus
reprendió su pocafé, etc. O se debe sostener que to copistas supersticioso á un uso destinado á desterrar
da esta narracion es una fábula inventada por los tres
las supersticiones paganas.
evangelistas, ó es preciso convenir en que fue un mi Se ha establecido en todas las religiones, que para
lagro. hacer agradable á Dios nuestro culto, debiamos puri—
AGUA CONVERTIDA EN VINO. V. CANA.
ficarnos del pecado por medio de los sentimientos de
compuncion, puesto que Dios ha permitido perdonar
AGUA DE CELOS. V. CELos. al pecador tan luego como se arrepintiese. Luego el
reconocerse culpable, sentir el deseo que tenemos de
AGUA, empleada en las ceremonias de la religion. ser purificados, hacer esta confesion, es ya un prin -
Guiados los hombres por un sentimiento de gratitud, cipio de penitencia. Manifestarle por el signo esterior
ofrecian á Dios sus alimentos y bebidas como un tes de la purificacion, con el objeto de escilar en nosotros
timonio de sumision y reconocimiento; de aqui ha el pesar de haber pecado y el deseo de corregirnos,
nacido el uso de hacer libaciones en los sacrificios, ó es por consiguiente una dica
religiosa, util y lau
derramar agua sobre las víclimas. Cuando se supo dable, y es una leccion que da á los fieles la Iglesia
hacer uso del vino y de otros licores, se derramó en al bendecir el agua, con el fin de que se sirvan de
vez del agua y se hicieron de él libaciones. ella con este objeto.
El autor de la antigüedad sin velo por sus usos cre Por tanto el uso de hacer sobre sí mismo una as—
yó que las efusiones del agua eran un signo conme persion con agua bendita al entrar en la Iglesia, ha
morativo del diluvio universal; mas esta es una ilu sido practicado desde los primeros siglos. Eusebio.
sion sin fundamento alguno. El agua era necesaria Hist, eccles. lib. 10, c.; dice que Paulino hizo colo—.
ara lavar las víctimas, como el fuego para consumir car á la entrada de la Iglesia de Tiro una fuente, co
as: no se comia alimento alguno de carne sin beber al mo símbolo de la espiacion sagrada. S. Juan Crisósto
mismo tiempo; no tenia pues el agua mas relacion al mo reprende á los que al entrar en la Iglesia , lavan
diluvio que el fuego respecto á la quema de Sodoma. sus manos V no sus corazones. Hom. 71 in Joan.
Se dice en el libro 1.º de los Reyes, c. 7, y . 6, que Synesio, epist. 121, habla de cierta agua lustral si
los israelitas se reunieron en Masfa , á invitacion de tuada á la entrada de los templos, y asegura sirve pa
Samuel, donde sacaron agua y la derramaron á pre ra las espiaciones del pueblo.
sencia del Señor, ayunando todo aquel dia para es Bingham y otros protestantes pretenden que esta
piar sus faltas. Esto parece significar que llevaban el ablucion practicada por los antiguos, no era una pu
rigor del ayuno hasta el punto de abstenerse de toda rificacion sino una ceremonia indiferente, ó cuando
bebida, y que para obligar á él á todos los demas, mas un signo esterior de la pureza de alma con que
agotaron los pozos y cisternas de Masfa. se debe entrar en el templo del Señor; y sostienen
La Sagrada Escritura nos refiere en muchos de sus que el uso actual del agua bendita es un abuso, una
pasages, que los Judios se abstenian de comer y beber corrupcion del antiguo uso, y una supersticion del
en los dias de ayuno solemne. Esdras lib. 1, c. 1.ºy. paganismo, renovado por la Iglesia romana.
6, Esth. c. ... y 16; Joan. c. 3, y .7. Mas no se infie Estraño modo de raciocinar Conque practicar un
re de aqui que los judios creyesen espiar su idolatria signo esterior de purificacion, con el fin de alcanzar
derramando cántaros de agua, como han tenido á la pureza de alma que debemos tener para venerará
bien imaginar algunos incrédulos Dios es una ceremonia indiferente?Si fuera supersti
ciosa los antiguos Santos Padres la hubieran vitupera
AGUABENDITA. Existe una costumbre muv an do. El cristiano que se persuadiere de que el agua
tigua en la Iglesia católica de bendecir por medio de sola puede purificarle, seria un insensato; la Iglesia,
oraciones y ceremonias el agua con que se rocia á al hacer la aspersion del agua bendita, pone en la bo
los fieles y á las cosas que sirven para su uso. En vir ca de los fieles estas palabras del Salmo 50: »Vos ha
tud de esta bendicion, la Iglesia pide á Dios purifique » reis sobre mí, Señor, una aspersion, y seré purifi
del pecado á los que se sirvan de ella, de librarlos »cado; vos mismo me lavareis, y me pondreis blanco
de las emboscadas del enemigo de la salvacion y de » como la nieve.» De Dios y no del agua es de quien
las calamidades de este mundo. En las constituciones debemos esperar la pureza del alma, y para pedírsela
apostólicas redacladas hácia el fln del cuarto siglo, empleannos el signo esterior que la representá.
se llama al agua bendita un medio de espiar el peca Sabemos que tenian los paganos un vaso de agua
do y de auyentar al demonio. El padre le Brun, Ea lustral á la entrada de sus templos; esta práctica no
plic des cerem t. 1.ºp. 76, ha probado con el testi era mala en sí misma sino mal aplicada; se figura
monio de los antiguos Padres, que el uso del agua ban que les purificaba esta agua por sí misma, sin
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que fuera necesario arrepentirse y cambiar de vida: Bien podia haber visto en la primera carta de San
esto era un error. Si un cristiano pensase como los Pablo á Timoteo, c. ... y., donde dice este Apostol,
paganos, se engañaria como ellos. Los judios tenian hablando de los alimentos, que toda criatura es bue
iambien cierta agua de espiacion , de que se habla en na: que se santifica por la palabra de Dios y por me
los Núm. c. 19; hacian aspersiones , mas nada se dio de la oracion. ¿Creyó S. Pablo que sin esto esta
infiere de aqui. El agua bendita no tiene pues mas re ban infestados los elementos por los malos espíritus?
lacion con el paganismo , que con el judaismo y con En la Epístola á los de Efes. c. 5. y 25. dice que Je
la religion de los Noachidas. Jacob preparándose á sucristo se entregó á la muerte en beneficio de su
ofrecer á Dios un sacrificio, dijo á su familia: purifi Iglesia con el fin de santificarla, purificándola por el
caos, y cambiad de vestidos. Gén. c. 35. y. 2. En to bautismo de agua y por la palabra de vida. Véase
dos tiempos y entre todos los pueblos han estado en pues un agua que tiene una virtud divina y santifi
uso las abluciones religiosas: ¿ qué razon deberia cante, y cuya creencia no es una superstición.
haber suprimido la Iglesia católica un uso tan anti Concedemos que el pueblo ignorante y grosero,
guo como el mundo? Si se debiera desterrar todo dispuesto siempre á pervertirlo todo, ha hecho fre
cuanto ha sido practicado por los paganos, seria pre cuentemente un uso supersticioso del agua bendita;
ciso suprimir todo culto esterior, como arrodillarse, mas el mismo Thiers, que ha tratado esta materia con
inclinarse, prosternarse, porque lo habian hecho to exactitud, ha notado que ciertos usos considerados
do esto delante de sus ídolos. como supersticiosos por críticos demasiado severos,
Durante el tiempo de las rogativas, se bendice el no lo son en efecto. Tratado de las supersticiones.
agua de los pozos, cisternas de las fuentes y rios, ro t. 2, l. 1. c. 2. n. 6. Por lo demas, si se opina con
gando á Dios haga saludable su uso á los fieles. En veniente suprimir todas las prácticas de que se puede
la Historia de la Academia de las Inscripciones. t. 6. abusar, es como si se quisiera desterrar todos los
en dozavo. p. ... existe una erudita memoria acerca alimentos, cuyo abuso puede causar enfermedades.
del culto de que los paganos rendian á las aguas, al "éase SUPERsticioN.
mar, á los rios y á las fuentes, sobre las divinidades
que habian forjado para presidirlos, sobre las causas AGUA DEL BAUTISMO. La bendicion solemne
naturales ó imaginarias que habian hecho nacer es— del agua en la Iglesia romana, es la de las fuentes
tos cultos, y finalmente sobre las supersticiones y bautismales, la cual se celebra en el sábado santo y
abusos que acompañaban ó mezclaban con este cul en la vigilia de Pentecostes. La Iglesia ruega á Dios
to. Cuando se reflexiona sobre este asunto, se cono haga descender sobre esta agua la potestad del Es—
ce que la bendicion de las aguas hecha por la Iglesia, píritu Santo, que la fecundice y dé la virtud de re
es muy propia para convencer á los fieles de que es— generar á los fieles. Esta es una profesion de fé acer
te elemento no es ni una divinidad ni la mansion de ca de los efectos que produce el bautismo. La fór—
los pretendidos dioses inventados por los paganos; mula de esta bendicion se halla en las Constitucio
ue Dios la creó para utilidad de los hombres, y que nes apostólicas, l.7. c. 3, y está conforme con la
él solo se debe consagrar su uso."Mas los reforma que se usa al ¿º, Tertuliano y S.Cipriano ha
dores, mal instruidos acerca de los usos de la anti blaron ya en el tercer siglo acerca de ella. Bingham
güedad, y de las razones que ha tenido la Iglesia ha citado sus palabras y las de otros muchos Padres.
para instituir sus ceremonias, han considerado cie— (Irig. eccles., t. l. 11. c. 10, y no ha osado tratar
gamente como restos del paganismo las prácticas de supersticion , á esta ceremonia, que los protestan
establecidas esprofeso para desarraigar todas las tes han tenido á bien suprimir.
ideas y errores de los paganos. Recientemente sus Mas por no dejar escapar una sola ocasion de ala
sucesores, menos , ignorantes, deberian recordar cará la Iglesia romana, pretende que los Santos Pa
que en el cuarto siglo, época en que fijan el naci dres hablaron acerca de esta consagracion del agua
miento de la mayor parte de nuestros ritos, los filó— bautismal, como de la de la Eucaristía, y en los mis—
sofos emplearon todos sus esfuerzos en sostener la mos términos; de lo que infiere que los Santos Pa
idolatria vacilante, justificando sus nociones y cos dres no supusieron mayor conversion ó transubs—
tumbres, y disimulando sus absurdos. Era pues lle tanciacion en el pan y vino, en virtud de las pala
gado el momento de tomar todas las precauciones bras de la consagracion que en el agua de las fuentes
osibles, y multiplicar las instrucciones para forta bautismales. Ibid. S.; pero miente: los Santos Pa
ecer á los pueblos con las asechanzas que se les dres jamás dijeron e esta agua fuese la sangre
preparaban. de Jesucristo ni que la contenia, así como tampoco
Beausobre no ha conseguido otra cosa que hacerse ue se convirtiera en esta preciosa sangre, que se la
ridículo, cuando dijo que esta santificacion del agua ¿ adorar, etc. como lo aseguraron respecto á la
es una ceremonia supersticiosa fundada sobre dos de la Eucaristia.
errores; el primero, que los malos espíritus infestan En la Iglesia griega, los obispos ó sus vicarios
los elementos, y que es necesario ahuyentarlos por mayores hacen el dia 5 de enero á la caida de la tarde
medio del exorcismo; el segundo, que el Espíritu el agua bendita, porque creen que Jesucristo fue
Santo, á quien se invoca por la oracion, desciende bautizado el dia 6 de este mes. El pueblo bebe de
donde está el agua y la penetra de una virtud divi esta agua y hace aspersiones en las casas; los Papas
na y santificante. Yo quisiera, dice, para honor de ó sacerdotes bendicen de nuevo el agua al siguiente
los ortodoxos, que constase esta práctica por actas dia, que es el de la Epifania, cuya nueva agua bendita
ciertas é incontestables. Historia de los maniq. l. 2. sirve para purificar las iglesias profanadas y para ec
c. 6. S. 3 sorcizar á los poseidos.
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Los prelados armenios bendicen una sola vez al la Trinidad. El nono, las obras contra los donatis—
año el agua, que es el dia de la Epifania, y llaman tas. El décimo, todo cuanto escribió contra los pe
á esta ceremonia el bautismo de lo cruz, porque des lagianos. El undécimo, contiene la vida de S. Agus
pues de haber rezado muchas oraciones sobre el agua tin con sus índices de la mayor amplitud. Es preciso
meten dentro de ella el pie de la cruz, que está colo añadir el duodécimo, con volumen que se titula
cada sobre el altar. Se añade tambien que sacan de Apéndice compuesto por Le Clerc.
la distribucion de esta agua todos los años una renta Ninguno de los Santos Padres ha recibido tan
considerable. Lebrun ha descrito esta ceremonia. magníficos elógios, ni sufrido tan amargas censu
t.5. pag. 360. ras, ni dado ocasion á tan vivas contestaciones.
Los teólogos católicos le consideran como el orá
AGUA MEZCLADA CON VINO EN LA EUCA— culo de la Iglesia y el vencedor de tres sectas de
RISTIA. El uso de mezclar el agua con el vino que hereges; como un genio superior á quien Dios col
se consagra en la misa, es tan antiguo como la insti mó de luces estraordinarias para esplicar la sagra—
tucion de la Eucaristía; asi lo han asegurado los da Escritura, especialmente los escritos de S. Pa
Santos Padres del segundo y tercer siglo, como San blo; como un maestro cuyas opiniones no se pue
Cipriano, S. Justiniano,S. Clemente de Alejandría y den desechar sin hacerse sospechoso de error. Los
S. Ireneo, é igualmente se hace mencion de esto en heterodoxos, particularmente los socinianos, sos—
los libros litúrgicos Inas antiguos. Los Santos Padres tienen que es el mas ignorante de todos los comen
dan por razon de esta costumbre, no solo que Jesu tadores, que no sabia ni el hebreo ni el griego, ni
cristo lo hizo tambien cuando instituyó la Eucaris tenia ninguno de los conocimientos necesarios para
tía sino ademas porque el agua mezclada con el vino entender los libros sagrados; un entusiasta y un so—
es el símbolo de la union del pueblo cristiano con fista, dispuesto siempre á erigir sus opiniones en
Jesucristo, y la figura del agua y sangre que salieron artículos de fé, perseguir á los que tenia á bien de
de su costado cuando estaba sobre la cruz. Los ebio— llamar hereges; Le—Clerc nos le representa como
nitas y encratitas, discípulos de Taciano, fueron con los socinianos, con muy corta diferencia.
denados por que consagraban con agua sola, y se les S. Agustin ha tenido entre los modernos, sábios
llamó hidroparastas por los griegos y acuarienses apologistas: el Cardanal Noris, el célebre Muratori,
por los latinos. Les armenios que no consagraban el marqués Scipion Maffei, M. Bossuet, Defensa de
mas que con vino puro, fueron tambien censurados la tradicion y de los Santos Padres, etc. Sin quitar
or esta misma razon en el concilio in Trullo, que mérito alguno á sus obras y sin contradecirlas en
es opuso la práctica antigua atestiguada por las li nada, nos permitiremos algunas reflexiones.
turgias; las demas sociedades de cristianos orienta— 1." El medio mas conveniente para hacer ca
les les vituperaron este abuso. Véase Lebrun. Er llar á los enemigos de S. Agustin y de la Iglesia,
plicacion de las cerem. t. 5: p. 123 y siguientes. No ve no es el atribuirá este Santo Padre una especie de
mos la razon porqué los protestantes han suprimido infalibilidad que estaba bien ageno de pretender;
este rito en su cena; ¿lo habrán considerado tambien
frecuentemente desaprobaba el zelo demasiado ac
como una supersticion? tivo de sus amigos. «Si vosotros pretendiéreis pro
La Iglesia católica siempre se ha propuesto, aun bar, les dice, que yo no me he engañado en nin
en los usos que parecen los mas indiferentes, de no gun pasage de mis obras, trabajareis en vano, de
separarse en nada de la tradicion y atenerse á lo que fendereis una mala causa, y la perdereis en mi pro
se ha practicado siempre, como tambien á lo que pio tribunal. Yo no exijo que se abracen todas mis
siempre se ha enseñado. La sabiduria de esta con opiniones, ni que nadie me siga, sino en lo que se
ducta está bien probada por la multitud de errores, vea que no hay error alguno. Por esta misma causa
abusos y absurdos en que han caido todas las sectas he resuelto formar unos libros en que revise mis
que siguieron un método contrario. La regla, Nihil obras, con el fin de demostrar que yo no me he se
innovetur, nisi quod traditum est, será siempre la guido á mí mismo en muchas cuestiones. Y aunque,
mejor salvaguardia de la religion. por la misericordia de Dios, creo haber hecho algu
nos progresos, no tengo sin embargo la vanidad de
Agustin (San ), obispo de Hipona en Africa, pensar que en mi edad avanzada me halle á cubier
es el doctor mas célebre de la Iglesia; ningun otro io de todo peligro de errar.» Epist. 13, n. 2;
escribió tanto como él. Un teólogo no puede dispen Epist. 3, n. 8; de dono perseverantiae, c. 21,
sarse de conocer sus obras. La mejor edicion es ¿e n.55; de anima et ejus origine, lib. 4, c. 1, n. 1; Re
los Benedictinos en once volúmenes en folio. El pri tractaciones, lib. 1 ; Prólog., n. 2, etc.
mero contiene los dos libros de las Retractaciones, 2.º, Supuesto que el mismo S. Agustin recur
las Confesiones, algunas obras filosóficas y muchos re á la tradicion , el modo de seguir la regla que
tratados contra los maniqueos. El segundo, las Epís establece es el de examinar si todas las opiniones
tolas de S. Agustin. El tercero, los Comentarios so— ue sostiene en sus obras están conformes con la
bre diferentes partes del antiguo y nuevo Testa ¿ de los Santos, Padres que le precedieron.
mento. El cuarto, los discursos sobre los salmos. El Nadie puede creerse obligado á seguirlas sino en
quinto, los sermones. El sexto, diferentes tratados cuanto se reconozca en ellas una constante tradi
sobre el dogma y la moral. El sétimo, otras obras cion que se eleve hasta los siglos de los apóstoles. Ja
semejantes y los veinte y dos libros de la Ciudad de más creyó este santo Doctor que debiera formar él
Dios. El octavo, muchos escritos contra los mani solo el lenguaje de la fé; y por respelable que sea su
queos y los Arrianos, y ademas quince libros sobre autoridad, nada impide examinar diferentes puntos
 AGU AGU
sobre los cuales nada ha decidido aun la Iglesia, reto, S. Isidoro de Damieta, S. Proclo de Constantí
3.° Escribiendo el Papa S. Celestino en el nopla, S. Efrén, S. Máximo, S. Pedro Crisólogo, San
año 31 á los Obispos de las Galias, despues de ha Juan Damasceno, &c. Estos Santos Padres abrazaron
ber reconocido el merito de S. Agustin, asi como todas las opiniones de S. Agustin, todas sus esplica
tambien los servicios que habia prestado á la lgle ciones sobre la sagrada Escritura, las cuales quisie
sia, y lo ortodoxo de su doctrina, despues de haber ron hacer pasar por artículos de fé.
fijado la inteligencia del dogma católico contra los 6.” A juicio de los hombres instruidos puede
pelagianos, añade: «Cuanto á las mas dificiles cues parecer sospechoso un celo escesivo por las obras de
tiones y mas profundas, que fueron tratadas con la S. Agustin. Con algunos pasages cien veces repeti
mayor estension por los que refutaron á los hereges, dos, y que se hallan en cualquier parte de sus obras,
no nos atreveremos á despreciarlas; mas tampoco se dá cualquiera, á poca costa, cierto realce de orto
creemos sea necesario establecerlas. Con efecto, para doxo; se cree dispensado de consultar la sagrada Es
confesar la gracia de Dios, á cuyo mérito é influen critura en sus originales, de indagar la tradicion de
cia nada se debe quilar, nos parece suficiente con los cuatro primeros siglos, de respetar á los antiguos
servar lo que nos han enseñado los escritos de la Santos Padres, de guardar miramiento alguno á los
santa silla apostólica, segun la regla de que os hemos teólogos moderados, y aun de raciocinar consecuen
hablado, y no considerar como católico todo cuanto temente.
parezca contrario á sus decisiones.» Nos resta defender á S. Agustin contra las calum
Asi es que en la doctrina prescrita , por este nias de los herejes é incrédulos,
Pontífice, no se suscitan ni la cuestion de la predes Le acusan primeramente de haber raciocinado
tinacion gratuita á la gloria eterna, ni la de la distri siempre como un completo materialista acerca de la
bucion mas ó menos abundante de la gracia, ni de la naturaleza de las substancias espirituales. Sin em
naturaleza de la gracia eficaz, ni del modo de conci— bargo se halla en sus obras acerca del misterio de la
liarla con la libertad, ni del suplicio eterno reserva Trinidad, lib. 10, c. 10, una demostracion de la es
do al pecado original; por consiguiente todas estas piritualidad del alma, á la que no han respondido
cuestiones son del número de las que S. Celestino no jamás los materialistas; esta demostracion está for
ha juzgado necesario establecer, y que por consi— mada del sentimiento interior. Yo siento mi propia
guiente no pertenecen á la fé católica. existencia, dice S. Agustin, y me siento distinto de
... No querer hallar los sentimientos ú opinio todo ser que no es yo; es asi , que no siento ni la
nes de S. Agustin sobre la gracia sino en sus escri— existencia, ni la estructura, ni el juego de mi cere
tos contra los pelagianos, es un acto de prevencion bro, ni de ninguna parte interior de mi cuerpo; lue
que favorece bien poco al Santo Doctor, pues que se ¿ cada una de estas partes y todas ellas considera
da ocasion á creer que ha incurrido en contradiccion as á la vez, no son yo; y asi lo que llamo yo ó mi
en lo que escribió contra los maniqueos, que refutó alma, es alguna otra cosa mas que esto. S. Agustín
muy insuficiente á estos últimos, y por fin que ha creido y probado seguramente la creacion, toma
hizo traicion á la causa de la religión, siendo estas da en todo su riguroso sentido; puede ser por ven
otras tantas suposiciones falsas é injuriosas. Al con tura creador un ser corporal ó material? V. INMATE
trario se asegura que la Iglesia aprobó km. Rl ALISMO.

te todo cuanto escribió el Santo Doctor contra los
pelagianos, sin que por esto haya reprobado lo que
escribió contra los maniqueos y donatistas, asi como
tambien sus comentarios sobre la sagrada Escritura,
sus Epístolas, sermones, y finalmente sus obras de
moral y de piedad; en estas últimas S. Agustin no
disputaba sino instruía. Se añade que en nada se ha
retractado de cuanto enseñó contra los pelagianos;
yo lo creo, escribió contra ellos hasta el fin de su
vida, y su última obra quedó imperfecta; si por esto
se nos quiere insinuar que retractó lo que habia di
cho contra los maniqueos, se nos engaña; en 20 ó
#21, despues de haber disputado por espacio de
diez años contra los pelagianos, refutó á un mani
queo. L. contra advers. legis et proph. Lejos de re
vocar lo que habia sostenido en sus primeras obras,
le remite á ellas, por lo que se ve que no desaprue—
ba su doctrina. Para comprender sus verdaderos
sentimientos, es preciso compararle consigo mismo,
y ver cómo se le puede conciliar.
5." Los pelagianos fueron condenados por la
Iglesia griega y latina en el concilio de Efeso. Por
consiguiente los griegos no adoptaron los errores de
estos hereges, y la Iglesia griega formó parte de la
Iglesia universal hasta el siglo IX. En este intérvalo
de tiempo vivieron 5. Cirilo de Alejandría, Teodo
2.º Le acusan de haber rebatido la libertad de
indiferencia, y admitido en la voluntad, movida por
la gracia, la misma necesidad de obrar que Calvino
y Jansenio. Calumnia horrorosa. Lo que es cierto de
todo punto, es que S. Agustin rebatió solamente la
indiferencia sostenida por los pelagianos, es decir,
la igual inclinacion al bien que al mal,, la misma
facilidad de hacer io uno que lo otro, y el equilibrio
de la voluntad entre lo uno y lo otro, que era en lo
que querian hacer consistir la libertad. Véase , op.
inperf. lib. 3, n. 109, 117, etc. S. Agustin sostiene
con razon que el hombre, corrompido por el pecado
original, no tiene ya esta feliz indiferencia; que se
inclina mas bien á lo malo que á lo bueno, que ne
cesita una gracia que restablezca en él el libro albe
drio, confiriéndole la facultad de escoger el bien.
Ha sido necesaria toda la prevencion de Calvino y
Jansenio contra este Santo Doctor, para sostener que
una gracia que restablece la libertad impone la ne
cesidad de obrar bien.
3.° Tambien se le acusa de haber sido predes
tinador en tan alto grado como Calvino. Nosotros
haremos ver en el artículo PREDESTINACION la diferen
cia que hay entre el sistema de Calvino y el de San
Agustin. Baste observar por ahora, que este Santo
Padre ha entendido por predestinacion de los Santos
 º
AGU 5, AG.
ra predestinacion de los fieles á la gracia de la fé, doctrina de Manes; falsa preocupacion que no se ba
como lo probaremos por medio del análisis del libro verificado respecto de ninguna secta herética, y que
que compuso bajo este título. jamás tendrá ni aun sombra de verosimilitud , pies
l.° Se le vitupera de haber enseñado una moral que todo herege pretende ser el árbitro de su creet.cia
¿ , sosteniendo que Sara, esposa de Abra y no estar sujeto á las lecciones de maestro alguno.
am, pudo permitir á este patriarca tomase á Agar Creerémos nosotros que S. Agustin no supo conocer
por concubina, y estableciendo por máxima, que los verdaderos sentimientos de Fausto, Adimanto,
todo esto es propio solo de los justos. En el artículo Felix, Segundino, &c., con quienes disputó de viva
PolyGAMA probaremos que este abuso no estaba v0z, mejor que Beausobre, que pretende adivinarlos
prohibido á los patriarcas por derecho natural: que por medio de conjeturas y probabilidades?
Agar era segunda esposa de Abraham y no una con En cuanto á las respuestas y argumentos de este
cubina. El abuso de un término no es un lítulo legí Santo Doctor, verémos en el artículo MAN1qUEismo,
timo para condenar á los Padres de la Iglesia. Le— cómo refutó victoriosamente el principio fundamentºl
jos de aprobar la máxima: todo pertenece ó es propio de esta heregía, y cómo resolvió con la mayor soli
solo de los justos, S. Agustin ha reprobado y conde dez la dificultad sacada del origen del mal. Una vez
nado á los que, bajo este pretesto, se apoderaron de alcanzado este triunfo decisivo, todo lo demas del
los bienes de los donatistas. -
sistema de Manes cae por tierra ; mas Beausobre
5.° Se ha dicho que despues de haber estable— no se dignó hacer esta observacion, que era sin
cido la tolerancia en favor de los maniqueos, predi embargo lo primero que debió examinar para darnos
có la persecucion y violencia contra los donatistas. una pintura fiel de la disputa.
Si; S. Agustin predicó la persecucion de los donalis Los enemigos de este Santo Doctor, no se han re
tas sedicioses armados y sanguinarios, que por sus ducido solamente á calumniar su doctrina, sino que
circunceliones llenaban el Africa de desórdenes y lambien han querido hacer sospechosas sus virtudes,
carnicería; mas no dijo que se emplease con ellos la sus mas laudables acciones y la misma confesion que
violencia cuando se conservaron pasivos ó pacíficos: hizo de sus faltas. Le Clerc pretende que S. Agustin
enseñó é hizo todo lo contrario, y tuvo el consuelo de escribió sus confesiones, más bien para imponer si
verlos reunidos á la lglesia. lencio á sus detractores que por humillarse con sus
Barbeyrac pretende que este Santo Doctor apro— debilidades, y que es una especie de apolojía muy
bó la pena de muerte impuesta por los emperadores hábil. San Agustin, dice, confiesa los desórdenes de
contra los paganos. Deberia al menos decir contra su vida que no pudo ocultar, y suprime, ó escusa lo
los sacrificios de los paganos. El pasage de S. Agus. restante, y no desprecia ocasion alguna de darse im
tin está terminante. Epist. 93, ad Vincent. Rogatis. portancia; debió estar poseido de una gran dosis de
tam, n. 10. Podia cualquiera ser pagano sin necesi amor propio para hablar tan largo tiempo sobre sí,
dad de que ofreciese sacrificios, y no vemos las ven y para entretener á sus lectores con cosas que debe
tajas que podia acarrear á la causa pública el con— rian serles indiferentes de todo punto; se dirije áDios
servar un uso tan absurdo, frecuentemente acompa para no ocuparlos sino de sí mismo; si trató simple
ñado de crímenes. mente de edificarlos, no juzgó menos necesario pu
6.° Se ha pretendido hacer creer que se hacia blicar los delectos cometidos despues de su bautis
pelagiano cuando escribia contra los maniqueos, y mo que los que verificó antes de recibir este Sacra
que se convertia en maniqueo cuando disputaba con - ment0.
tra los pelagianos. Esta es una calumnia de que se Algunos enemigos envidiosos podían decir que S.
ha justificado el mismo S. Agustin en sus libros de Agustin no hizo un gran sacrificio en renunciar á su
las Retractaciones y en otros lugares. Mas para com profesion de retórico y orador profano, para ejercer
parar sus diez volúmenes en folio, para distinguir los su talento sobre un teatro mas brillante en la Iglesia
argumentos absolutos de los personales que forma de misma, donde estaba seguro de representar un papel
los principios de sus adversarios, se necesita mayor mas honroso y mas ventajoso; que por medio de tina
sagacidad, paciencia y rectitud, que la que tuvie pobreza aparente habia adquirido el derecho de
ron los críticos de este Santo Padre. Las acusaciones
subsistir á espensas de los ricos, y aun la facultad
que hemos presentado están tomadas de los socinia de asistir á los pobres ; que aparentando rentinciar á
nos y de sus amigos los armenianos, de Bayle, de Le todo, habia llegado á dominar sobre todo un pueblo
Clerc y de Barbeyrac; los sábios Muratori, Maffe y á nombre de Dios; á hacerse gefe de partido, á poder
ademas muchos teólogos los han refutado sin que los escomulgar, condenar y perseguir á los que le desa
hereges los hayan replicado. Nosotros mismos relu gradaban. Las verdaderas faltas, eontinúa Le Clerc,
tarémos á estos hereges y á otros muchos en los di de que Agustin debia haberse arrepentido, eran las
versos artículos de este diccionario. Véase Lamindus de haber querido entremeterse á esplicar la Escritura
Pritanus, de ingeniorum moderatione in religionis santa, despues de una simple lectura, sin saber el
negotio, et hist. theol. dogmatum et opin. de divina idioma griego ni el nebreo, sin haber adquirido nin
gratia, &c. Beausobre, en su Historia del Mani guno de los conocimientos necesarios; otra de sus
queismo acusa frecuentemente á S. Agustin de qe faltas ué el haber sido ordenado sacerdote y Obispo
no refiere con fidelidad las opiniones de los maii contra los cánones del concilio de Nicéa, que proh
queos; de atribuir á estos hereges ciertos errores que bian á los Obispos nombrar sucesores suyos durante
no han sostenido, y de refutarios con débiles razones. su vida; y en fin delia arrepentirse de haber llegado
Esta acusacion supone que todos losdoctoresmaniqueos al mas alto grado de gloria, de autoridad y poder,
tenian las mismas opiniones y que seguian todos la habiendo aparentado renunciar al mundo, á las
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riquezas, y honores; artificio que se ha empleado en geografia, &c.; mas sino quiso tomar sino lecciones
lo sucesivo por tantos sugelos, y siempre con el mis morales para regla de su conducta y de todos los de
mo feliz éxito. mas, todo este aparato de ciencias no le fué necesa
Por indecente que sea esta sátira de Le Clerc, no rio. Mas véase hasta donde llega la obstinacion y preo
hemos temido copiarla, con el fin de manifestar has— cupacion de los proleslantes: interpretan la sagrada
ta qué punto llega la malicia de los protestantes con Escritura como se esplica á Homero ó Herodóto; y
tra los Padres de la Iglesia. Antes de aventurar se porque los Santos Padres de la Iglesia solo buscan los
mejante censura, deberia estar cierto de muchos he rincipios con que pueden alimentar la piedad y no
chos de que no podia tener Le Clerc prueba alguna, a curiosidad; esto desagrada á los protestantes.
y que se reconoce ser falsos, por poco que se consulte Le Clerc supo, sin duda tambien por revelacion, que
á la historia. -
cuando S. Agustin escribió contra los maniqueos,
1.º Le Clerc supone que cuando S. Agustin es donastistas, pelagianos, arrianos y priscilianistas, lo
cribió sus confesiones, lo hizo con el objeto de pu hizo por ira, por envidia de disputar y contrade
blicarlas, y que, por espíritn profético, previó que le cir, y no movido del ceio por la pureza de la fé y la
sería necesaria esta sagaz apolojía para imponer si salvacion de su grey. Sin embargo otros protestantes
lencio á sus detractores; que su designio era ocupar han observado que trató á los hereges con mas mo
sobre sí mismo la atencion de sus lectores, y no el de deracion que san Gerónimo, á pesar de ser este San
escitarse al reconocimiento para con Dios, y en me to Doctor mas anciano que S. Agustin, Mas su gran
moria de las faltas que le habia perdonado Dios por crímen consiste en que supo dominar á los entendi
medio del bautismo. Mas parece cierto que esta obra mientos, caplarse la confianza, y hacerse admirar
se escribió hácia el año de 400, poco despues de haber por la superioridad de sus talentos y por el ascen
sido promovido S. Agustin al episcopado, y entonces diente de sus virtudes. Dichoso aquel á quien con
no vemos que tuviera detractores, ni acusaciones que cede Dios tan elevado mérito para atraerse seme
rechazar. El modo con que se espresa, el remitirlas jantes vituperios. El fué el azote de los hereges de
á un amigo que se las habia pedido, Epístola 265, su liempo, y debe ser por consiguiente criticado por
denuestra el mas perfecto candor, y no creemos ha los hereges de todos los siglos.
cerle favor si decimos que era de un carácter dema Otro crítico, mas temerario aun pretendió ue San
siado vivo para ser hipócrita. Si no refiere las faltas Agustin, se reconocia por sí mismo entregado á los
que comelió despues de su bautismo, fué porque de escesos del vino, porque dijo en sus confesiones, Lib.
bió considerarlas como materia propia de la confe 10, c. 31, n. 47; «Yo estoy muy distante de embria
sion sacramental, y no de una declaracion pública; garme, sin embargo que la crápula me acomete al
pues semejante declaracion no convenia á un Obispo, gunas veces.» este hombre ¿ supo que la crá
obligado á hacer respetar su carácter. pula significa solamente el dolor de cabeza que pro
2." La mayor parte de las fallas de que se acu— viene del vino mal digerido ; el hombre mas sóbrio
sa S. Agustin, no habian sido tan públicas para que puede estar, sujeto por, debilidad del estómago á
llegasen á nolicia de sus enemigos, y las locuras de esta enfermedad que produce muy frecuentemente el
la juventud de que se acusa, no eran por su natura trabajo de espíritu continuado por largo espacio de
leza deshonrosas: en qué estribaba pues, la necesi liempo. Es cosa muy singular que unos escritores del
dad de formar una apolojía artificiosa? Qué ventaja décimo séptimo ó décimo octavo siglo se lisonjeen
podia sacar S. Agustin con la tal apolojía en favor de en destruir una repulacion de talentos y virtudes
su reputacion ? Los africanos, embelesados con sus establecida despues de mil y docientos años, y no nos
talentos, no pensaban absolutamente en pasar á Ita debemos admirar de el furor con que destrozan á los
lia para averiguar lo que habia hecho alli. vivientes, cuando no perdonan ni aun á los muertos
3.° Quién revelóá Le Clerc que cuando este ni á los santos.
Santo Doctor abandonó la profesion de retórico, des AGUSTIN, título que dió Cornelio Jansenio, Obispo
pues de su bautismo, y volvió al Africa, tenia ya el de Yprés, á una obra que compuso acerca de la gra
designio y la esperanza de ser promovido á las sa cia, en la que pretendia sostener el verdadero sen
gradas órdenes, que cuando se retiró á la soledad, tido de S. Agustin , en la que presenta la clave de
sabia que se le llamaría bien pronto para elevarle los pasages mas dificies de este Santo Padre sobre
al sacerdocio y al episcopado; que cuando opuso re esla materia.
sistencia á su Obispo que queria ordenarle, no fué Este libro, que causó tan vivas disputas, y que
dio origen á la heregía denominada Jansenismo,
sincera su resistencia? Si peco ó faltó en esto el Obis—
po Valerio contra los cánones del concilio de Nicéa, no apareció hasta despues de la muerte de su autor,
la falla no puede ni debe atribuirse á S. Agustin; el y se hizo la primera impresion en Lovaina, año de
primado de Cartago y detnas Obispos fueron los que 160, en un volúmen de á folio. Está dividido en tres
debian haberse quejado, y no vemos que ninguno se partes. La primera contiene ocho libros sobre la he
quejase: juzgarian sin duda que en algun caso p0dia regía de los pelagianos. La segunda en nueve, uno
ser dispensado el cumplimiento de estos cánones. sobre el uso de la razon y de la autoridad en materia
l." Si S. Agustin hubiera tenido el mismo de teológica, otro sobre la gracia del primer hombre y
signio al emprender la esplicacion de la sagrada Escri de los ángeles, cuatro acerca del estado de la natura
tura que Le Clerc, que se propuso hacer alarde de eru leza caida, y tres del estado de la naturaleza pura.
dicion y mestrarse mas hábil que los demas comenta La tercera parte está subdividida en dos: la una
dores, le hubiera sido necesario sin duda al Santo po contiene un tratado de la gracia de Jesucristo, en
seer el idioma griego, el hebreo, elementos de historia, diez libros; la otra es un paralelo entre el error de
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los semi-pelagianos y la opinion de algunos moder modada para el uso de los hombres, en qué pais, y
nos, esto es, de los teólogos que admiten la gracia por qué medio se verificó esta mutacion, es aun una
suficiente. dificultad que los sabios no han podido resolver hasta
De esta obra se han estractado las cinco famosas el presente. -

¿ que contienen toda la substancia, y que

lan sido coadenadas por muchos soberanos Pontífi
Lo cierto es que los hermitaños de S. Agustin se
hallaban multiplicados prodigiosamente en Europa en
ces. En el artículo JANsENismo trataremos este punto el siglo trece; y formaban diferentes congregaciones,
con mas estension. de las que eran las mas conocidas las de Juan Boni
34 , Agustiano. (Derecho eclesiástico) Religio tas, que tenian por fundador á Juan el bueno, y la de
so que sigue la regla de S. Agustin. los Britinianos, que habian tenido su orígen en Brit
El Orden de los Agustinos es uno de los mas an tini en la Marca de Ancona. La mayor parte de es
tiguos que se establecieron en la parte occidental de tas congregaciones no tenian nada de comun entre sí,
la cristiandad. Tuvo principio en Africa el año de ni tocante á la regla ni en el método de vida. Aun
388. Despues de haber recibido S. Agustin el bau existian algunas que no observaban regla alguna fi
tismo renunció á todas las pretensiones que pudiera ja: lo que ocasionaba frecuentemente ciertas contes
tener sobre la tierra : , esposa, hijos, dignidades ri taciones entre los diferentes miembros que las com
quezas, todo fue olvidado para consagrarse entera ponian. Para evitar estos inconvenientes, se resolvió
mente á la perfeccion evangélica. Vendió cuanto po— Alejandro IV á unirlos á la vez, para que no forma
seia para el socorro de los pobres, y no se reservó sino sen en lo sucesivo sino un solo cuerpo. Trabajó para
lo que le era absolutamente necesario para la vida. que se verificase esta union desde el primer año de
Tuvo algunos compañeros que se le unieron con el su pontificado, esto es, el año de 1254. Mandó en co
mismo designio, y no se trató de otra cosa que de ha mision con este objeto á Ricardo, cardenal titulado
llarun sitio propio para ejecutar su objeto. Aun le que de S. Angelo, el cual era ya protector de los hermi
daron á S. Agustin algunas tierras cerca de Tagaste taños de Toscana. Este cardenal escribió á todos los
en Africa, y este sitio les pareció el mas á propósito superiores de diferentes congregaciones que se le pre
para vivir retirados del mundo; se ejercitaron, duran sentasen, lo que no se consiguió sin dificultad; pues
te tres años, en los ayunos, en la oracion y en prac no se los pudo reunir hasta el año de 1256, en el con
licar buenas obras, imitando, todo cuanto les fue po— vento de santa María del pueblo. La primera operacion
sible, la vida de los solitarios del Egipto. que se ejecutó fue la de nombrar un general que go
S. Agustin poco tiempo despues, fue nombrado bernase solo todas las congregaciones que existian
obispo de Hipona, y dejó á sus compañeros para ocu entonces, para no tener que reformar en lo sucesivo
parse de los deberes del Episcopado. Estableció en sino un solo Orden, y recayó la eleccion sobre Lan
esta ciudad un monasterio, y mandó llamará algu franc Septala, de orígen Milanés, y de la congrega
nos clérigos para que le ayudasen en sus trabajos cion de los de Juan Bonitas.
apostólicos. Sus compañeros hacian por su parte, ca Despues en la misma asamblea se dividió el Ordeu
da dia mayores progresos en el nuevo género de vi en cuatro provincias, que fueron las de Francia, Ale
da que habian abrazado. Estos pobres voluntarios que mania, España é Italia; y para el efecto se nombraron
todo lo habian dejado para practicar la vida comun, cuatro provinciales. Todas estas decisiones fueron
se grangeaban el aprecio general de los habitantes confirmadas por el mismo Papa, segun una bula del
de aquel pais; y se les dió tierras y jardines, en los 13 de abril del mismo año: y por una bula del si
que fundaron iglesias y monasterios; en una palabra, uiente año eximió á la Orden de la jurisdiccion de
no reinaba otro deseo que el de multiplicar sus esta os ordinarios. Creó al propio tiempo por protector de
blecimientos. En el siglo quinto constituian ya un nú esta Orden al cardenal Richard, que presidió al ca
mero considerable, cuando los vándalos entraron en pítulo general, y habia trabajado mas que nadie para
Africa y la desolaron. Todas las iglesias, todos los conseguir esta reunion. Le concedió ademas la facul
monasterios fueron robados, saqueados: fue tan vio tad de arreglarlo todo en este Orden naciente, y eje—
lenta la persecucion, que los obispos, los clérigos , y cutar todos los cambios que creyese convenientes para
los religiosos se vieron obligados á abondonar el pais, conservar la tranquilidad y observancia regular.
y refugiarse en diferentes partes de la Europa: esta Podemos notar aqui que antes de es la reunion hu
revolucion sin duda es la que conduce á creer que bo muchos altercados entre los hermitaños de san
los religiosos, que han lomado el título de Hermitaños Agustin y los religiosos llamados Hermanos menores,
de S. Agustin, traen su origen de los antiguos mon á causa del color de su hábito: unos y otros querian
ges establecidos por este prelado en Africa. usar del color gris, y los Hermanos menores soste
Cuando á la regla que seguian los primeros discí nian que este color les pertenecia á ellos y no á
pulos de este santo fundador, solo se presentan datos los hermitaños. Gregorio IX, para hacer cesar es
aparentes, como lo hace observar el Padre elio, de tas disputas, resolvió que los hérmitaños llevasen un
que no tenian mas regla que la del Evangelio, pues hábito negro ó blanco, con mangas largas y anchas
la Epistola 109 de S. Agustin, que es la 2 t. en la en figura de cola, y un ceñidor de cuero por encima,
edicion publicada por los RR.PP. Benediclinos, y bastante ancho para que pudiera verse; que llevasen
que sirve al presente de regla á las personas de uno siempre en la mano unos bastones de cinco palmos
y otro secso de diferentes congregaciones que se glo de alto, hechos en forma de horquillas, y que dijesen
rian de tener por padre á este Santo Doctor, no fué el Orden á que pertenecian cuando pidiésen limosna;
dirigida hasta el año 423 á los religiosos que habia en fin, que su ropa no fuese tan larga que impidiese
lecido en Hipona; mas el saber cuando fue aco ver los zapatos, con el objeto de que se pudiesen dis
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tínguir mejor de los Hermanos menores que eran des el que los administra los sacramentos como tambien
calzos. Pareció á los Agustinos una cosa tan incómo á los conclavislas. En oto tiempo el sacristan era bi
da como ridícula el tener que llevar contínuamente bliotecario del Vaticano, y así permaneció hasta el
el bordon; y asi se aprovecharon de la buena dispo pontificado de Sisto IV que separó estos dos oficios
sicion del Papa Alejandro IV, suplicándole al tiempo para dar el debibliotecario á Platina, autor de la vida
de su reunion los librase de aquella especie de servi de los papas y de otras muchas obras.
dumbre: lo que efectivamente les concedió. El Pontífice Pio V, puso en 1567 la Orden de los
En 1287, siendo general Clemente de Ausimas, fue Agustinos en el número de las cuatro medicantes; á lo
ron examinadas las constituciones primitivas de la menos quiso que por tal fuese reputada, aunque po—
Orden, y aprobadas en un capítulo general verificado
sey esen rentas y propiedades. Esta Orden ha produ
en Florencia. Fueron nuevamente examinadas y cido un gran número de personas recomendables por
aprobadas en otro capítulo general celebrado en Ra su santidad y erudicion, enumerándose entre ellas co
tisbona. En 1575 hubo otro en Roma y en él se hi mo ilustres por sus virtudes, Santo Tomás de Villa
cieron algunas alteraciones; y últimamente en 1580 nueva, Arzobispo de Valencia, S. Nicolas de Tolen
el cardenal Savelli, protector de la Orden, y el ge— tino, S. Juan de Sahagun y los sabios Onufrix, Pau
neral Tadeo de Perousa dispusieron otras nuevas, mi de Verona, autor de muchas obras de antigüeda
las cuales fueron aprobadas por Gregorio XIII, des— deseclesiásticas, un Cristiano Lobonaturaldelpres, etc;
pues de haberlas examinado por órden del mismo los pero uno de los que mas han hecho ilustre á esla Or
cardenales Alcialo y Justiniano. Segun estas constitu— den es el Cardenal Henrique Noris de Verona; las
ciones debian verificarse capítulos generales cada seis disputas que sostuvo por su historia Pelagiana le han
años, si los vocales los juzgasen necesarios, Cuando hecho, uno de los hombres mas célebres de la Italia.
se celebran estos capítulos, pueden obligar al general Entre los varios cardenales que esta Orden ha dado á
á entregar los sellos de la Orden, y entonces tienen la Iglesia se enumeran el P. Buenaventura, el P. Gilles,
el derecho de elegir nuevo general. En el celebrado el P. Seripan, el P. Petrochrin, etc. El hábito que usan
en Roma en 1620, asistieron 500 vocales, lo cual estos religiosos dentro de casa consiste en una túnica
rueba que los Agustinos se habian multiplicado. y escapularios blancos; y cuando van á coro 6 salen
¿ hoy dia dividida esta Orden en 2 provincias, fuera, se ponen una especie de cogulla negra y por
sin contar la vicaría de las Indias, la de Moravia y encima una gran capilla que es redonda por delante
muchas nuevas congregaciones que tienen vicarios y remata en punta por detrás hasta el ceñidor, que
generales. Dicen algunos autores que llegaron en otro es de correa negra. “

tiempo hasta dos mil los monasterios de esta Orden Los Agustinos tienen dos conventos grandes que es
que constaban de mas de treinta mil religiosos. tan sujetos inmediatamente al general de la Órden,
Entre otras prerogativas concedidas por los Pon uno en Roma y otro en Paris: el de esta capital se
tífices á la Orden de que nos ocupamos, es digno de llama de los grandes Agustinos, sirve de colegio á
notarse, que el oficio de sacristan de la capilla del todas las provincias de la órden de Francia, á donde
Papa es propio de un individuo de ella: dicho oficio envian á estudiar á los religiosos que quieren gra
toma el título de Prefecto de la sacristía del Papa; duarse; se les admite á los estudios de la universidad
bajo su custodia eslan los vasos de oro y º. los re asi como á las otras tres Ordenes mendicantes, que son
licarios y todas cuantas preciosidades ay en ella. los franciscos, carmelitas y dominicos. Siendo preci
Cuando el Papa celebra el sacrificio de la misa, sea so reformar el convento de Paris, el P. Pablo Luchu
de pontifical ó privada, el Prefecto es el que hace en ni, general de la Orden, hizo la visita en 1659 como
su presencia la prueba del pan y del vino. Si el Papa general y comisario apostólico en virtud de un breve
emprende un viaje largo, dos espolistas, uno criado de del Papa Gregorio VII, hizo muchos reglamentos
su Santidad y el otro del sacristan, tienen la mula por en él para la observancia regular y se aprobaron en el
la brida; ejerce entonces una especie de jurisdiccion capítulo general verificado en Roma en 1661. Ade
sobre todos los que acompañan al Papa, llevando en más de los dos conventos de Roma y de Paris, hay
señal de ella un baston en la mano. El es quien dis cerca de otros treinta y seis que están sujetos inme
tribuye á ios cardenales las misas que solemnemente diatamente al general, como son los de Tolosa, Mom
deben celebrar, presentando antes la distribucion que pellier y Aviñon. El superior del convento de Bru—
ha hecho de ellas al primer cardenal presbítero; y nen en la Moravia es perpétuo, usa de ornamentos
tambien distribuye á los prelados asistentes las misas pontificales, y ejerce una jurisdiccion casi episcopal
que deben celebrar en la capilla del Papa. Si el sa en muchos pueblos.
cristan es obispo, lo que casi siempre se verifica, al AGUSTINOS REFORMADOS. La relajacion, que
menos in partibus, ó si está constituido en dignidad, se introduce en todas partes, no perdonó la Orden de
tiene puesto en la capilla entre los prelados asisten los Agustinos, porque muchos de estos religiosos pen
tes cuando el Papa asiste; y si no asiste tiene asiento saron reformarse en el siglo XIV; es decir, abrazar
entre los mismos segun su antigüedad, sin atender á un género de vida mas regular qne el que observa
su calidad de prelado asistente. Si no es obispo tiene han. El primer manasterio donde comenzó la refor
su puesto despues del último obispo ó del último abad ma en 1385 fue el de liceto, en Italia: los que se aso
mirado; y aunque no lo sea, no por eso deja de llevar ciaron á esta reforma compusieron , la primera con
mantelete y muceta como los prelados de Roma. gregacion reformada que se llamó de Iliceto. Con el
Muerto el Papa entra en el cónclave en calidad de ejemplo de esta reforma se formaron otras congrega
primer conclavisla: celebra el sacrificio de la misa ciones diferentes las unas de lasotras: apareció la con
diariamente en presencia de todos los cardenales y es gregacion de las Carboneras, en Nápoles la de Perou
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se en Roma; la de Lombardia, de la cual depende el calzos de S. Pablo de la Regla, y fueron recibidos por
monasterio de nuestra Señora de Bron, cerca de Bour ellos con el consentimiento del general. Despues de
en-Bresse; la de Génova; la de Monte- Ortono; la un año de noviciado profesaron en la regla adoptada
e la Pulla; la de Sajonia, que ha producido al famo por la reforma; y el Papa Clemente VIII los nombró
so heresiarca Lutero; la de la Claustra en España; la para introducirla en Francia, y creó á Mateo de San
de la Calabria; la de Centorbi en Sicilia; la de los Co ta Francisca vicario general de la congregacion que
toritas en el reino de Nápoles; la de Dalmacia, etc. Las se iba á establecer.
dos congregaciones reformadas que hay en Franciason El arzobispo de Embrur, Guillermo de Avanzon,
la de S. Guillermo de Bourges y la del Bienaventurado prior comentario de S. Martin de Miserere en la pro
Tomás de Jesus, llamada de los Agustinos descalzos. vincia del delfinado, hallándose en Roma entonces,
La congregacion de los Agustinos de S. Guillermo de queriendo restablecer la observancia regular en
Bourges, por otro nombre los Guillermitas, no entró en priorato de Villars-Benoit, dependiente del de Mise
la union general de los hermitaños de S. Agustin, ya re, el cual habia sido arruinado por los hereges, ob
porque los diputados que habia enviado al capítulo¿ tuvo del mismo Papa un breve el año 1595, por el
neral que hubo para la reunion en tiempo de Alejandro cual se permittia entrar en aquel monasterio á los re
IV se habian escedido de sus poderesó por otra causa ligiosos descalzos de la orden de S. Agustin, y esta
se habian opuesto á la union, solicitando permanecer blecerse en él y aun continuar en Francia la reforma,
en el mismo estado bajo el instituto de S. Guillermo, lo como se iba haciendo en España. Para la egecucion
que lesfueconcedido; por lo cualesta congregacion for de este breve tomó sus disposiciones el Arzobispo de
mó despues de ella una de las cuarenta y dos provin Embrur, junto con los superiores y religiosos; y el 7
cias de la orden de S. Agustin; con todo no dejan de de marzo de 1596 se ¿ el acta en Roma. El P.
contaria en el número de las congregaciones refor Mateo de Santa Francisca, el P. Amet y un hermano
madas. En efecto, se verificó la reforma en esta pro lego recibieron la venia del general para volverá
vincia en 1593 por el celo de los PP. Esteban Rava Francia; acompañaron al Arzobispo, y asi que llega
che y Rogerio Hirat. Estos religiosos, considerando ron tomaron posesion del priorato de Villar-Benoit.
la poca proporcion que habia entre la antigua obser Habiéndose aumentado en poco tiempo el número
vancia y la que se practicaba entonces en Francia en de estos religiosos, obtuvieron permiso de los supe
los difcrentes conventos de la 0rden, resolvieron vivir riores de la Orden para hacer nuevos establecimien
conforme á las antiguas constituciones que se propu tos en el año 1600: el Papa Clemente VIII les dió su
sieron observará la letra bajo la obediencia del pro aprobacion por un breve del mismo año. y por otro
vincial de la provincia de Francia. Desde luego se del 26 de junio de 1607 los rocomendó al rey Enrique
unieron á ellos algunos compañeros, y el convento de IV. El año siguiente salió el P., Amet á Marsella para
Bourges fue el primero en donde comenzaron esta tomar posesion de un monasterio que les habian con
nueva vida, llamándose por esto dicha congregacion cedido en aquella ciudad, y el año de 1610 se esta
la comunidad de Bourges. Erigieron nuevos monas— blecieron en Aviñon. Dos años despues el general les
terios, á los que se reunieron algunos otros antiguos; concedió un vicario, y aquel mismo año confirmó
de modo que en poco tiempo hubo hasta veinte, que Paulo V por un breve de 4 de diciembre el que ha .
fueron gobernados por un provincial particular. Esta bia espedido Clemento VIII en favor de los Agusti
provincia tomó despues, de algunos años el nombre nos descalzos de Francia. El primer capítulo de la
de provincia de S. Guillermo. En París llamaban á nueva congregacion se celebró en Aviñon. Luis XIII
estos religiosos los Agustinitos ó los Agustinos de la confirmó las cartas patentes que les habia dado Enri
reina Margarita, porque su convento fue fundado por que IV para establecerse, permitiéndoles poseer bie
Margarita de Valoix, primera muger de Enrique IV, nes inmuebles, cuyos breves y cartas patentes se re
antes que fuese rey de Francia. Su hábito es casi se gistraron en 1619 en el parlamento de Aix.
mejante al de los Águstinos de la antigua observan Luis XIII fue el que fundó el convento de París ba
cia, llamados en Francia los grandes Agustinos; la úni jo el título de nuestra Señora de las Victorias, en me—
ca diferencia que hay es de que los de la reforma de moria de haber tomado la Rochela á los calvinistas.
Bourges llevan el hábito mas estrecho; y á fin de que La reina Ana de Austria fundó los religiosos de esta
á los demandantes en París se les distinga de los del congregacion que hay en el sitio llamado las Chozas
convento de los grandes Agustinos, llevan la ropa mas en el bosque de S. German, y se declaró tambien fun -
corta que estos. dadora del monasterio de Tarancon.
La reforma de los Agustinos descalzos se llamó asi Luis XIV en 1655 les concedió privilegio para que
porque los que la abrazaron añadieron la desnudez fundasen en Roma un convento de religiosos france
de los pies al número de las demas mortificaciones. ses, mas no tuvo efecto; sin embargo, aquel príncipe
El P. Tomás de Jesus la empezó, y el P, Luis de Leon quiso que los deseos que tenia de manifestará estos
la continuó en 1588 en el monasterio de Talavera en religiosos su estimacion no quedasen desconocidos, y
Castilla: esta reforma hizo muchos progresos; se es concedió á esta congregacion unas armas, que son
tendió por la Italia, la Alemania, el Austria, la Bo un campo azul sembrado de flores de lis doradas,
hemia, la Sicilia y otros paises. Veamos cómo se in cargadas en corazon de un escudo de oro con tres
trodujo en Francia. Mateo de Santa Francisca, prior corazones de golas, y sobrecargadas con tres flores
de los Agustinos de la antigua observancia en Ver de lis de oro, sobrepuesta al escudo una corona de
dum , conociendo su inutil trabajo en la reforma del príncipe de la sangre, rodeado este de un rosario y
monasterio, pasó á Italia con el P. Francisco Amel; una correa de S. Agustin y timbrado con un sombre
entraron en Roma en la casa de los Agustinos des ro episcopal. El mismo monarca dió ademas á cada
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una de las tres provincias de que se compone esta Su sistema se reduce principalmente á los puntos
congregacion unas armas particulares; estas tres pro siguientes. 1.° Que para hacer obras meritorias y
vincias son el Delfinado, que tiene quince casas; la de útiles para la salvacion, las criaturas libres, en cual
la Provenza que tiene otras tantas y la de Francia quier estado que se las suponga, tienen necesidad del
e no tiene mes de seis. Sus constituciones son algo socorro interior y sobrenatural de la gracia. Este
iferentes de las de los italianos. Unos y otros tienen
es un dogma de fé decidido contra los pelagianos.
dos especies de hermanos legos, unos que llaman con 2." Que en el estado de la naturaleza inocente
versos, y otros comisos ó encargados. Los conversos esta gracia no fue eficaz por sí misma y por su natu
llevan capilla, las comisos tienen sombrero sin capi raleza, como lo es al presente, sino voluble, y á esta
lla. Estos sirven para la demanda, ó para los nego llaman adjutorium sine quo.
cios de la casa. 3." Que en este mismo estado de la naturaleza
AGUSTINOS (canónigos regulares de S. Agustin). inocente no hubo decretos absolutos, eficaces, ante
No se deben confundir con los religiosos de que hemoscedentes al consentimiento previsto de la criatura, y
hablado: los canónigos de que vamos á tratar forman por consiguiente ninguna predestinacion á la gloria
entre sí muchas congregaciones, todas diferentes de anterior á la prevision de los méritos, ninguna re
la de los hermitaños de S. Agustin. Entre las diver probacion que no suponga la prevision de los demé
sas congregaciones de canónigos regulares se conocen Tilos.
en Francia las de los canónigos de Letran, del santo .." Que en el estado de la naturaleza caida ó
Sepulcro, de S. Salvador de Valdes-Ecoliers, y par corrompida por el pecado, la gracia eficaz es nece
ticularmente la congregacion de Francia, mas conoci saria por sí misma para todas las acciones sobrenatu
da bajo el nombre de los Genovevinos. Todos los ca rales; y llaman á esta gracia adjutorium quo.
nónigos están habilitados para poseer bienes inmue 5." Fundan la necesidad de esta gracia, no so
bles, y aun beneficios. Hablando de los beneficios de bre la subordinacion y dependencia en que está la
su Orden, no debemos pasar en silencio que se dió una criatura respecto del Criador, como quieren los lo
declaracion el 22 de Agosto de 1770, y se registró el mistas, sino sobre la debilidad de la voluntad huma
9 de Agosto del año siguiente, tocante á los beneficios na, considerada despues de la caida de Adan.
en general que dependen de las congregaciones de los 6.” Hacen consistir la naturaleza de esta gracia
canónigos regulares de S. Agustin. Segun esta de eficaz en una delectacion ó suavidad victoriosa, no
claracion, solamente los religiosos que han hecho pro por grados y relativamente, como la admiten los jan
fesion en estas congregaciones pueden poseer en ellas senistas, sino simple y absolutamente, por la que
los beneficios con cargo de almas: ninguno puede Dios inclina la voluntad al bien, sin herir, á pesar
aceptarlos sino despues de obtenido el consentimiento de esto, su libertad. Dicen, como S. Agustin, que Dios
del superior general, y aun deben presentar este con tiene una infinidad de medios desconocidos é incon
sentimiento al obispo diocesano; y si el superior ge cebibles al hombre para determinar absolumente
neral juzga conveniente revocar al beneficiado, este se su voluntad. Deus miris ineffabilibusque modis ho
halla obligado á obedecer, con tal que la revocacion mines ad se vocat et trahit. Lib. 1.° ad. Símplic.
sea con consentimiento del obispo, y no de otro modo, 7." Ademas de la gracia eficaz, los Agustinianos
no obstante lo que pueda resultar contrario del edicto admiten otra que llaman suficiente, gracia real que
de 1686. da á la voluntad suficiente fuerza para poder, sea me
El rey por otra declaracion del 6 de Agosto de diata ó inmediatamente, producir obras sobrenatu—
167, que interpreta la precedente, mandó que los rales y meritorias, mas que sin embargo no llegan
bienes de los canónigos regulares que falleciesen en á efectuarse sin el ausilio de una gracia eficaz.
los beneficios curados, continuasen perteneciendo á la 8." Segun estos teólogos, cuando Dios llama efi
congregacion en que habian profesado, sin que obsta cazmente á alguna persona, y quiere que praclique
se transacion alguna ni tratado de particion , aun el bien, la concede una gracia eficaz, la cual produ
cuando los bienes no fuesen pertenecientes á la Orden ce siempre su efecto: á los demas les da solamente
de su profesion. Los superiores pueden visitar una vez una gracia suficiente para poder cumplir sus manda
al año los edificios que pertenecen á los beneficios tos, ó al menos para pedir y alcanzar gracias mas
curados, y obligar á los poseedores á que hagan los fuertes que les hagan cumplir sus deberes.
¿ que son de obligacion. Si se trata de préstamos, Se hace algun tanto dificil comprender en qué sen
deben conformarse á lo que prescriben los artículos tido es suficiente una gracia que no es por su natu
16 y 17 del edicto de 1773 citado en la declaracion. raleza adjutorium quo; y aun es mas dificil concebir
(Estracto del Diccionario dejurisprudencia.) cómo la voluntad privada del adjutorium quo liene i
un poder real para hacer el bien.
Agustinos. Religiosos que reconocian á San 9.º, Sostienen que, en cuanto al estado de la
Agustin, por su maestro y fundador, y profesaban una naturaleza caida, se deben admitir decretos absolu
regla que se atribuye al Santo. los y eficaces por sí mismos que respecto á las obras,
son de un orden sobrenalural, y que la presciencia de
Agustinianismo. Agustinianos. En las estas mismas obras está fundada sobre decretos abso
escuelas, se dá este último nombre á los teólogos que lutos y eficaces.
sostienen que la gracia es eficaz por su naturaleza 10. Que la predeslinacion sea para la gracia, ó bien
absolutamente sin relacion algunaá las circunstancias para la gloria, es absolutamente gratuita; que la re
ni á los grados de fuerza ; y que pretenden fundar probacion positiva se verifica en consecuencia de la
esta opinion sobre la autoridad de S. Agustin. prevision de los pecados actuales, y la reprobacion
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negativa á causa del solo pecado original. Añadiré que jamás profesó el Santo Doctor, y de las que se hu
mos que, en este sistema, la salvacion eterna no se biera horrorizado si se le hubiera propuesto. En la
concede sino á un número muy pequeño de predesti voz jansenismo harémos ver que profesó formalmen
nados, los cuales son conducidos á ella por medio de te las verdades diatnetralmente opuestas á los erro
una série de gracias eficaces. res que Jansenio pretendió sacar de sus escritos.
Los Agustinianos se dividen en rígidos y en laavos. AGUSTINIANOS, hereges del siglo XVI, discípu
Los rígidos son los que sostienen todos los puntos que los de un sacramentario llamado Agustin, el cual sos-.
acabamos de esponer; los laxos son los que distinguen tenia que no se abriria el cielo á ninguna persona an
las obras sobrenaturales en fáciles y difíciles, los cua tes del dia del juicio final. Este es tambien uno de los
les solo exigen una gracia eficaz por sí misma para errores de los griegos, que fué condenado en los con
practicar las obras buenas difíciles, y sostienen que cilios de Lyon y de Florencia, y el mismo que profesa
para las otras, como v. gr. la oracion, consigue fre ron renunciar, cuando fingieron reunirse á la lglesia
cuentemente su efecto sin otro ausilio. Tal fué el I'01/1ana.
parecer del Cardenal Noris, del Padre Thomassino y
segun Mr. Habert, Obispo de Vabres, el que en su Asynianos, hereges llamados tambien agioni
tiempo se seguia comunmente en la Sorbona. Tour tas ó agioneses que aparecieron cerca del año de Je—
nély, trat. de Grat, part. 2. q. S. 2. No sabemos sucristo 694. Reprobaban el uso del matrimonio y
rque á una gracia suficiente con la que se hace una pretendian que Dios no habia sido el autor de este sa
¿ obra fácil, no se llama gracia eficaz, al me— cramento, su nombre se deriva de la voz griega A
nos por entonces, ó adjutorium quo. que significa privacion y de GyNE que significa mu
Limitémonos á observar que á escepcion del pri ger. Esta secta parece haber sido un vástago de la de
mer punto, decidido por la Iglesia contra los pela los maniqueos.
gianos y semi-pelagianos, todo lo restante es una
pura opinion. Habiendo leido á S. Agustin con toda la Al as, profeta del Señor, de quien se habla en
atencion que nos ha sido posible, hemos visto que lla el lib. 3." de los Rey, c. 11, y. 29. El es quien, ba
ma adjutorium quo al don de la perseverancia final jo el reinado de Salomon , anunció á Jeroboan, que
que concluye al tiempo de morir en estado de gra despues de la muerte de este rey, reinaria sobre las
cia. Mas no hemos hallado en ninguna parte que S. diez tribus de Israel con efecto se cumplió su pro
Agustin diese este nombre á la gracia actual, necesa fecia bajo el reinado de Roboan, hijo de Salomon,
ria para toda buena obra sobrenatural y meritoria. porque este joven rey, trató con dureza al pueblo que
Sin embargo sobre esta falsa suposicion estriba todo le pedia ser absuelto de una parte de los tributos.
el sistema que se le atribuye. La distincion entre ad De aqui han tomado ocasion los incrédulos mo
jutorium sine quo y adjutorium quo, no se halla sino dernos para asegurar que fuese este profeta la causa
en el libro de , Corrept. et grat., c. 12, n. 3; cuya del cisma de estas diez tribus y de todas las guerras
cuestion es de la perseverancia final, y no de alguna y males que se siguieron; que este fue el que inspiró
otra gracia. á Jeroboan la ambicion y el proyecto de subir al tro
Un inconveniente que merece la mayor atencion no. Sacan por conclusion que en general los profetas
es que no se pueden conciliar el mayor número de las eran unos rebeldes fanáticos, que sublevaban á los
partes de este sistema, sobre toda la reprobacion ne vasallos contra su rey, que soplaban el fuego de la dis
gativa de un número muy considerable de hombres á cordia, y que, por medio de sus pretendidas profe—
causa del pecado original, con la voluntad de Dios cias, creidas siempre por el pueblo, fueron por fin la
de salvar á todos los hombres, emitida claramente en causa de la ruina de su nacion.
la sagrada Escritura, y con la redencion de todos los Esta acusacion es grave; mas se apoya en algun
hombres por Jesucristo; estas dos verdades las ha sos fundamento histórico?
tenido S. Agustin con todas sus fuerzas, lo mismo que 1.º, Nuestros criticos suponen que la prediccion
los demas Sanlos Padres. de Ahias se la refirió á Jeroboan despues de la muer—
Para asegurarse de que siguen sus verdaderas te de Salornon; esto es falso, Salomon vivia todavia;
opiniones, no basta investigar lo que escribió en sus si este pro'ela no era sino un fanático, cómo pudo
libros contra los pelagianos , sino que se debe ade preveer "¿ Roboan, colocado sobre el trono, exas
mas conciliar lo que dijo en este punto con lo que en raria al pueblo ; que el pueblo se sublevaria; que
señó en sus comentarios sobre la Sagrada Escritura y as diez tribus, ni mas ni menos, sacudirian el yugo,
en sus sermones, para escitar á los fieles á la confian y se darian otro rey? Estuvo tan distante Jerobo
za en Dios, al reconocimiento para con Jesucristo, y de formar el designio por entonces de alcanzar la co
finalmente á tener una firme esperanza en la salva rona, que emprendió la fuga y se puso en salvo en
cion eterna. Si un sistema teológico no es útil para Egipto, de donde no volvió hasta despues de haber
animar la fé, afirmar nuestra esperanza y escitarnos al muerto Salomon.
amor de Dios, para calmar los temores y aumentar el 2." Tampoco vemos que Ahias tuviese parte al
valor de las almas demasiado tímidas, para qué sirve? una en la sublevacion del pueblo, ni que para na—
Hay sin embargo una distincion esencial entre los a contribuyese. La única causa de este motin fue
Agustinianos católicos, de quienes acabamos de ha la respuesta dura y amenazadora que dio Roboaná
blar y cuyo sistema nada contiene que sea contrario á las quejas de esta multitud reunida. El mismo Dios ha
la fé, y los falsos Agustinianos. Estos últimos son los bia revelado á Salomon lo que aconteceria despues
que sostienen las opiniones que Bayo, Jansenio, Ques de su muerte; Ahias no hizo mas que confirmar la
nel y otros osaron atribuir á S. Agustin; opiniones prediccion. Si Salomon no se aprovechó de este avi
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so para dar á su hijo lecciones saludables, fue culpa norte del Japón. Adoran al sol, á la luna, al mar y á
ble; mas no se debe atribuir la falta al Profeta. Lib., un dios del cielo; tambien creen en la existencia del
..", Reg., c. 11, y . 11. diablo, Jamás llegaron los habitantes del Japon á in
3.° Ni aun el mismo Jeroboan aparece haber te troducir entre ellos la religion de los Budistas.
nido parte alguna en la sedicion. Se refiere que las
tribus descontentas se revolvieron cada una entre si; Alba. V. v. Es riDURAs sACERDoTALes.
que habiendo mandado Roboan á uno de sus oficia
les para atraerlas á la obediencia, las tribus le ape Albaneses. Hereges que turbaron en el septi
drearon; que el mismo rey huyó de Sichen á Jeru mo siglo la paz de la Iglesia y que aparecieron prin
salen; que despues habiendo sabido las tribus que Je cipalmente en la Albania ó parte oriental de la Geor
roboan habia vuelto de Egipto, le enviaron dipula gia. Renovaron la mayor parte de los errores de los
dos, le hicieron acudir al sitio donde estaba constitui maniqueos y de otros hereges que habian vivido ha
da su asamblea y le establecieron por rey de Israel. cía mas de trescientos años. Su primer desvario con
Ellos mismos pues le escogieren de mºtu propio, y no sistia en establecer dos principios: el uno bueno, pa
por instigacion del Profeta. Lib.3." Reg., c. 12, y. 16. dre de Jesucristo, autor del bien y del nuevo Testa
Si las tribus hubieran tenido noticia de su predic mento; y el otro malo, autor del antiguo Testamento,
cion, hubieran comenzado por colocar á Jeroboan á el que desechaban, sosteniendo ser falso todo cuanto
su cabeza antes de dar muerte al oficial de Roboan. pudieron decir Abraham y Moisés, Añadian que el
...º , Lejos de atizar los profetas el fuego de la mundo es de toda eternidad, que el Hijo de Dios ha—
discordia en esta ocasion, evitaron la guerra y efu bia traido un cuerpo del cielo; que los Sacramentos,
sion de sangre. Tan luego como Roboan hizo tomar á escepcion del bautismo, son unas supersticiones
las armas á las tribus de Judá y de Benjamin para inútiles; que la Iglesia no tiene el poder de escomul
obligará las diez tribis rebeldes á someterse de nue gar, y que el infierno es un cuento forjado al capri
vo á su obediencia, el profeta Semeías le prihibió de cho. Prateole, Gautier, en su Chron.
barte de Dios pelear contra sus hermanos: las dos tri
us no pasaron adelante y por consiguiente no se ve Albigenses. Nombre que se daba generalmen
rificó la guerra. Ibid., c. 12, y. 22. Algunos incré— te á los hereges que aparecieron en Francia en los
dulos han tenido á bien de echar en cara á este profe—siglos 12 y 13, asi llamados, porque no solo se mul
ta, que habia confirmado á los rebeldes en su des. tiplicaron en la ciudad de Albi sino tambien en el
union. Mas nosotros los desafiamos á que nos citen Bajo-Langüedoc, cuyos habitantes fueron denomi
un solo profeta del Señor que haya escitado al pueblo nados por los autores de aquel tiempo Albigenses.
á sublevarse contra su soberano, bien sea en el reino Su doctrina era en el fondo el maniqueismo, pe
de lsrael ó ya en el de Judá. ro modificada diferentemente por las visiones de
5." Tampoco vemos que Jeroboan haya recono los diversos corifeos que la habian predicado en Fran
cido como un beneficio el servicio que le hizo el pro— cia, tales como Pedro de Bruis, Henrique su discí
fela Ahias; lejos de seguir sus consejos, indujo á los pulo, Arnaldo de Bressa, ect.; por lo que se les lla
israelitas á la idolatria. Tan luego como envió á su mó á estos sectarios petrobusianos, henríquianos, ar
esposa disfrazada para consultar con Ahias acerca de naldistas ó arnodistas; llevaron ademas otros muchos
la enfermedad de su hijo, este profeta, á pesar de es— nombres tomados de sus costumbres de que hablare
tar ciego á causa de su ancianidad, la reconoció aun mos despues en este mismo artículo. No debemos ad
antes que ella hubiera hablado; y la anunció sin mirarnos de que los autores que espusieron sus errores
contemplacion alguna la próxima muerte de este hijo no hayan guardado uniformidad en su relacion; jamas
y los castigos terribles que descargaria Dios sobre la se mantuvo constante en sus opiniones ninguna secta
estirpe de Jeroboan, como pena de su idolatria. Ibid. de herejes; cada uno de sus doctores cree ser el
c. 14. maestro para poder entenderlas y arreglarlas como
Si estos profetas hubieran sido impostores y faná mejor le agrada. Los Albigenses eran un confuso tro
ticos, se habrian dedicado sin duda á hacer la corte pel de sectarios, la mayor parte muy ignorantes y
y á manejar los reyes; mas al contrario, vemos á los en situacion nada satisfactoria para dar razon de su
rofetas judios dispuestos siempre á echar en cara á creencia: mas todos se reumian para condenar el uso
os reyes todos los crímenes, á predecirles los casti de los sacramentos y el culto esterno de la Iglesia
gos y á despreciar la muerte por cumplir las órdenes católica para querer destruir la gerarquía y variar
¿ habian recibido de Dios. Atribuirles los males la disciplina establecida. Por esta razon les han he
ue acontecian, es querer que fueran la causa de la cho el honor los protestantes de considerarlos como
perversidad de los príncipes, quienes jamás quisie sus antepasados.
ron aprovecharse de sus consejos. Puede citarse un Alano, monge del Cister, y Pedro, fraile del Vaux
solo rey á quien le haya resultado algun mal por ha Cernay, que escribieron contra ellos, les imputan:
berlos seguido? 1." haber admitido dos principios ó dos creado
res, bueno el uno y el otro malo, el primero criador
Alaijado, Alajada. Nombre que trae su ori de las cosas invisibles y espirituales; el segundo cria
gen de filiolus y filiola; y llaman asi á los niños que dor de los cuerpos, autor del antiguo Testamento y
tienen en la pila bautismal los padrinos y madrinas. de la ley judáica, por cuyos objetos no guardaban
V. PADRNo.
ningun respeto estos hereges, ved pues el fondo del
s antigüo maniqueismo. 2." De suponer la existencia
Almos. Pueblos de algunas islas situadas al de dos Cristos, el uno malo, que habia aparecido so
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ABI. o.3. ABI.
bre la tierra con un cuerpo fantástico y el cual no comunes entre ellos; pasageros porque enviaban emi
habia muerto y resucitado sino en apariencia; el sarios y predicantes por todas partes para divulgar
otro bueno, mas que no habia sido visto en este mun su doctrina y hacer prosélitos,
do; este era el error de la mayor parte de los gnós Su condenacion pronunciada en el concilio de Abi
ticos. 3.º De negar la resurreccion futura de la car— el año de 1176, fué confirmada en el de Letran el
ne, de enseñar que nuestras almas son demonios que año de 1179 y en otros concilios provinciales; mas
están alojados en nuestros cuerpos en castigo de los la proteccion que les dispensó Ramon VI, conde de
crímenes que habian cometido; por consecuencia, ne Tolosa, les hizo despreciar las censuras de la Iglesia
gaban la existencia del purgatorio y la utilidad de haciéndoles mas emprendedores, é impidió el fruto
orar por los difuntos; tambien tenian por una locu de las predicaciones de Santo Domingo y demás mi
ra la creencia de los católicos locante á las penas del sioneros que se enviaron para instruirlos y conver
infierno. Estos desvarios son tomados de diferentes tirlos. Las violencias que ejecutaron, obligaron á los
sectas de hereges. ...º De condenar todos los cacra papas á publicar una cruzada contra ellos el año de
mentos de la Iglesia; de desechar el bautismo como 1210. Mas solo á costa de diez y ocho años de guer
inútil; de mirar con horror la Eucaristia; de no ras y de muertes, abandonados por los condes de To
practicar ni la confesion ni la penitencia; de creer losa sus protectores, debilitados por las victorias de
ue estaba prohibido el matrimonio ó por lo menos Simon de Monfort, perseguidos por los tribunales
mirar la procreacion de los hijos como un crímen. eclesiásticos y entregados al brazo secular, fueron
Tambien opinaban asi los maniqueos. Finalmente re destruidos los albigenses. Algunos se escaparon y se
fieren estos autores que los Albigenses delestaban á unieron á los valdenses en los valles de Piamonte, de
los ministros de la Iglesia, que no cesaban de desacre la Provenza, del Delfinado y de la Saboya; por lo
ditarlos y declamar contra ellos; que no respelaban que ciertos autores han confundido muchas veces es
la santa Cruz, ni las imágenes ni reliquias, que las las dos sectas, siendo en su orígen muy diferentes;
los valdenses no han sido jamás maniqueos. V. Va.
destruian y quemaban en todos los sitios en que do DENSES.
minaban
Se dividian en dos órdenes, á saber: perfectos y Al nacer la pretendida reforma, unos y otros pro
creyentes. Los primeros hacian una vida austera en curaron reunirse á los Zingianos y finalmente se
apariencia, vivian en continencia, hacian profesion unieron á los calvinistas bajo el reinado de Francis
de aborrecer el juramento y la mentira. Los segun co 1." En vanecidos con este nuevo apoyo, se per—
dos vivian como los demas hombres y muchos de mitieron ejecutar ciertas violencias que airajeron so
ellos tenian costumbres muy desarregladas; creian bre ellos la sangrienta ejecucion de Cabriere y de
salvarse por la fé é imposicion de manos de los per Merindol, desde este momento han desaparecido, y
fectos. "¿ la antigua disciplina de los mani solo queda de ellos el nombre.
queos. La cruzada emprendida contra los albigenses, los
El concilio de Albi, que algunos llaman el conci suplicios á que se les condenó y el haber establecido
tio de Lombez, celebrado en el año de 1176, en el contra ellos la inquisicion, han dado amplia materia
cual fueron condenados los Albigenses bajo el nombre para declamar á los protestantes y á los incrédulos
de hombres buenos, y cuyas actas son citadas por sus copistas. Los unos y los otros ia repetido cien
Fleury, Hist. eccles. lib. 72, n. 61 les atribuye los veces que esta guerra fue una escena contínua de
mismos errores segun su propia confesion. Rai barbarie; que habia sido una locura querer conver
nerio en la historia que dió de estos mismos hereges tir á los hereges por medio del acero y del fuego; que
bajo el nombre de cátharos, espone su creencia, con el verdadere motivo de esta guerra fue la ambicion
corta diferencia del mismo modo. Mr. Bossuet, Hist. del conde de Monfort, que queria apoderarse de
de las variaciones, lib. 9, citó tambien á otros auto los estados del conde de Tolosa, y la falsa política
res que confirman todas estas acusaciones. de nuestros reyes, á quienes agradó el repartirse
Cón efecto, la mayor parte de los protestantes que los despojos.
habian querido persuadir de que los Albigentes soste No es nuestro designio justificar los escesos que
nian la misma doctrina que éllos, acusaron á los es pudieron cometerse de una y otra parte por hombres
critores católicos de haber atribuido á estos seclarios armados durante una guerra de diez y ocho años;
unos errores que ellos no tenian con el fin de hacer tambien sabemos que cuando se desenvaina la espa.
los odiosos y justificar el rigor con que se les habia da, se cree que todo es permitido; que un rasgo de
tratado. Mosheim, mejor instruido, no se alrevió á crueldad cometido por uno de los dos partidos se to
asegurar esto mismo; nada dijo acerca de sus dog ma por motivo ó pretesto de represalias sangrientas:
mas ni de su conducta, porque conocia muy bien que esto mismo se ha visto despues en nuestras guerras
no era posible justificar ni lo uno ni lo otro, Hist. civiles del siglo 16.0, no se obró por cierto con mas
eccles, siglo décino tercio. segunda parte, c. 5. S; 2. moderacion en el siglo 13.0 No pretendemos tam—
y Slu. nombre de hombres buenos se les dió desde lue poco sostener que sea laudable y permitido perse—
guir á sangre y fuego á los hereges, cuya doctrina en
go porque afectaban un esterior sencillo, regular y nada perjudique al órden y tranquilidad pública y
y sesignifica
pacifico,que
iharos, dieron ápuros;
sí mismos
mas su nombre deles hi-
el conducta cuya conducta sea por otra parte pacífica: toda la
cuestion se reduce á saber si los albigenses se halla
zo dar bien pronto otros: se les llamó cebones y pa ban en este caso. Esta es una discusion en la que ja
ratinos, es decir, rústicos y groseros: publicanos ó más han querido entrar nuestros adversarios.
poplicanos, porque se supuso que las mujeres eran 1.º Enseñar que el matrimonio ó procreacion de
TOMO l. 13
 ALB 84 ALB

los hijos era un crímen; que todo el culto esterno de apeló á las armas y á los suplicios sino cuando es
la Iglesia católica era un abuso, y por tanto era pre tos hereges intratables y furiosos no dejaron ya es
ciso destruirle; que todos los pastores son lohos rapa peratiza alguna de conversion. Cuando S. Bernardo
ces, y que deben ser esterminados: es esta una doc narchó á Langüedoc para combatirlos, el año de
trina que pueda seguirse y reducirse á práctica sin que 117, no llevaba mas arinas que las de la palabra de
se alteren el órden y el reposo público? Pueden creer Dios y las de sus virtudes. El año 1179, el concilio
se obligados en conciencia los pastores de la Iglesia á general de Letran pronunció el anatema contra ellos
tolerarla. El conde de Tolosa, cualesquiera que fue y añadió: «Cuanto los brabantinos, aragoneses, na
sen sus motivos, siendo sabedor de esto, tenia razon varros, vascongados, cotereses y triaverdinos, que
alguna para protejerlos? Bien sabemos que á escep no respetan ni las iglesias, ni los monasterios, y no
ción del primer artículo, los protestantes fueron de es perdonan ni á los huérfanos, ni la edad, ni el sexo,
te modo de pensar; mas nosotrosapelaremos al tribu sino que roban y todo lo talan como los paganos, or
nal del buen sentido y nos someteremos á su decision. denanos... á todos los fieles, para la remision de sus
Es cosa muy singular que los católicos hayamos de to pecados, que se opongan con valor á estos estragos
lerar unas opiniones que se dirigian nada menos que y que defiendan á los cristianos contra estos desventu
á hacernos apostatar y blasfemar contra Jesucristo, rados.» Canon 27. Hé aquí espresado claramente el
y se les dispensase á los albigenses de tolerar la doc motivo de la guerra contra los albigenses, y por lo que
trina católica, porque no se conforma con la suya. el legado Enrique marchó contra ellos con un egér
2.0 A pesar de todo cuanto puedan decir en su fa cito el año de 1181. No era por consiguiente para
vor los protestantes, es lo cierto que los albigenses co convertirlos por lo que se empleaba contra ellos la
menzaron á exasperar á los católicos insultándolos, y violencia, sino para reprimir sus estragos.
pasando despues á vias de hecho y empleando contra Los escesos á que se entregaron, están probados:
ellos las violencias, como tambien contra el clero, 1.º Por la confesion, misma que hizo el conde de
desde que se creyeron bastante fuertes. El año de 1147, Tolosa públicamente al legado el año de 1209, para
mas de sesenta años antes de la cruzada, Pedro el alcanzar su absolucion; 2.0 por el canon vigésimo del
Venerable, abad de Cluni, escribia á los obispos de concilio de Aviñon celebrado en el mismo año; 3.0 por
Embrum, de Die y de Gap: «Se ha mirado como un el testimonio de los historiadores de aquel tiempo,
crímen inaudito entre los cristianos rebautizar á los como testigos oculares. Qué deberemos pensar de los
pueblos, profanar las Iglesias, derribar los altares, albigenses, cuando se vio al conde de Tolosa su pro—
quemar las cruces, azotar á los sacerdotes, encarcelar tector, llevar la barbárie hasta el punto de mandar
á los monges, forzarlos átomar mugeres por medio de ahogará su propio hermano, porque se habia recon—
amenazas y tormentos». Hablando despues con estos ciliado con la Iglesia católica? El conde de Fóa era
hereges les dice: «despues de haber hecho una gran un mónstruo todavía mas cruel. Hist de la Igl. gal.
pira de cruces hacinadas, la habeis pegado fuego; vo t 10, lib. 29 y 30.
sotros habeis hecho cocer carne, y la habeis comido Monsheim ha disfrazado los hechoscon su acostum
en el dia de viernes santo, despues de haber invilado brada prudencia; dice que todas las sectas heréticas
públicamente al pueblo á que comiese.» Fleury, Hist, del siglo XIII convenian unánimamente en que la re
eccles. lib. 69. n. 2. Por estas buenas espediciones fué ligion dominante no era mas que un conjunto estrava
por las que fue quemado Pedro de Bruisen San Gilles, gante de errores y supersticiones, que el imperio de
algun tiempo despues. Con dificultad hubiéramos crei los Papas era una usurpacion, y su autoridad una ti
do todo esto si no hubieran renovado los protestantes ranía. Estos sectarios, segun él, no se limitaban á di.
estos escesos en el siglo XVI. - - - vulgar estas opiniones; tambien refutaron las supers
3.0 No se puede dudar que todos los libertinos y ticiones é imposturas de aquel tiempo por medio de
malhechores de aquellos tiempos, conocidos bajo el argumentos tomados de la sagrada Escritura; decla
nombre de piratas, bandidos y compañias, se uniesen maron contra el poder, las riquezas y los vicios del
á los albigenses, desde que vieron que bajo pretesto de clero, con un celo tanto mas agradable álos príncipes
religion se podia robar, violar, quemar y saquearim y á los magistrados civiles, cuanto que estos mismos
punemente. Asi es que en el nacimiento de la re nía estaban
de losdisgustados de las usurpaciones y de la tira -
eclesiásticos. w

forma, se vió á todos los eclesiásticos libertinos, á lo

dos los frailes díscolos y desarreglados, á todos los ma En efecto, los tejedores, los jornaleros y los labra
los súbditos de la Europa, abrazar el calvinismo, con dores de la Provenza y de Languedoc, eran unos doc
el fin de satisfacer con libertad todas sus pasiones cri tores muy hábiles en la Escritura santa; en el concilio
minales. Un hugonote, que tenia un enemigo católi de Albi el año de 1176, el obispo de Lodévelesopuso la
co, se vengaba á su gusto y con honor; los hijos su Escritura santa, y fueron confundidos, como lo acre
blevados contra sus padres les amezaban con que dilan las actas. Sus argumentos se reducian solamen
apostalarian; un hombre del campo ó aldeano que le a simples declamaciones, chanzonetas, insultos, ca
quisiera mal á su señor ó á su cura, podia emplear lumnias y vias de hecho; como las de los hugonotes.
contra ellos todo su ódio; los predicantes santificaban pºr olfa parte se sabe el uso que sabian hacer los ma
todos los crímenes cometidos por celo contra el pa niqueos de la sagrada Escritura; ya se ve en las dis—
pismo; sus sucesores los disculpan aun en el dia. pulas que soslavo S. Agustin contra ellos. Aun cuan
4,0 Antes de encruelecerse contra los albigenses do hubiera sido cierto que la religion dominante en el
se habian empleado por espacio de mas de cuarenta siglo XIII era un cúmulo de errores y supersticiones,
años las misiones, las instrucciones y todos los me— la de los albigenses valia aun menos; puesto que era
dios que podia sugerir la caridad cristiana. No se un caos de los desvaríos de dos ó tres sectas diferentes.
 ALB 5, A (

Aun cuando esta última hubiera sido mas pura, no 4." Por esto mismo se vé el ridículo en que in
correspondia á unos simples particulares, sin mision curren Basnage y los protestantes, que ¿
hacer
alguna, el establecer y aun menos emplear la violen pasar á los albigenses por sus antepasados ó sus ma
cia, el asesinato y el latrocinio, para conseguirsu objeto. yores: ninguno de estos herejes hubiera querido fir
Porque los protestantes hayan hecho lo mismo, no es mar una profesion de fé luterana ó calvinista, y nin
esta una razon suficiente para aprobareste estraño mé gun síncro protestante habria querido adoptar to
todo de reformar la Iglesia. dos los desvarios de las diferentes sectas de albi
Si los príncipes estaban disgustados de la tirania de genses.
loseclesiásticos, cómo pudieron sostenerá manoarma 5.º Gran cuidado tuvo Basnage de disimular las
da los esfuerzos que hacian el Papa y los obispos para verdaderas razones por las que fué preciso emplear
reprimir á los albigenses? el rigor contra estos impíos, á saber, sus violencias,
o nos tomarémos el trabajo de refutar los motivos sus vias de hecho y su furor contra el culto esterior de
odiosos por los que sepretende que nuestros reyes, y la Iglesia católica y contra el clero. Quiso persuadir
sobre todo S. Luis, tomaron parte en la guerra con que se los castigaba únicamente por sus errores, lo
tra los albigenses y contra el conde de Tolosa. A la ver cual es falso. Si alguna vez se ha condenado al supli
dad, el tratado por medio del cual hizo este señor su cio á los novadores, antes de que hubiesen tenido
paz con S. Luis en 1228, fué muy ventajoso á la co tiempo para formarse un partido formidable, es por—
rona, pues que en él se estipuló que la heredera delcon. que su doctrina y sus principios tendian directamen
de de Tolosa casaria con uno de los hermanos del rey, te á la sedicion y á alterar la tranquilidad pública.
que á falta de hijos varones, vendria á parar este V. HEREGE.
condado al rey. Mas luego que se resolvió la cruzada
contra los albigenses, diez y ocho años antes, no se po— Alcorán. V. MAHOMETIsMo."
dia preveer esta cláusula, y nos parece que el conde
de Tolosa debiótenerse por muy honrado con esta alian Alcuino, diácono de la iglesia de Yorch;fué lla
za. Pero se sublevó pasados catorce años, cuyo com— mado á Francia por Carlo-Magno, y tuvo el honor de
portamiento no le hizo ningun honor; la victoria de S. dar lecciones á este emperador, como tambien el de
Luis en Telburgo obligó á este vasallo rebelde á so contribuir al restablecimiento de las letras: falleció en
meterse; desde entonces, privadoslos albigenses de to su abadía de S. Martin de Tours en 804. Compuso mu
da proleccion, fueron fácilmente destruidos. chas obras teológicas, las cuales se resienten de la ru—
Basnage en su historia de la Iglesia lib. 2, ha em deza del octavo siglo; mas la doctrina es pura. El au
pleado todos sus esfuerzos en refutar la historia de los tor debe ser colocado entre los escritores eclesiásticos
albigenses delineada por Mr. Bossuet: ve ahí lo que re. y los testigos de la tradicion. Se espera la nueva edi
sulta de todas sus indagaciones. cion de sus obras, promelida por un sabio benedicti
1.° Antes que los maniqueos, esparcidos por la no de la congregacion de S. Vannes, esta será mas
Lombardia en el siglo doce, hubiesen penetrado en exacta y completa que la de Andres Duchesne, en tres
Francia, existian ya en nuestras provincias meridiona volúmenes de á folio.
les ciertos secuaces de Pedro y de Enrique de Bruis, Basnage ha querido persuadir que Aleuino no opi
los cuales dogmatizaban y tenian tambien sus asam naba como los católicos respecto á la Eucaristía ; se
bleas. Aun cuando no tuvieran las mismas opiniones rueba lo contrario en la Perpetuidad de la fé, tom. 1
los maniqueos no dejaban cuando llegaban estos ¿ 8, c. . -

e unirse á ellos y hacer causa comun con ellos, lo mis. c. S" Las obras de este autor, llamado tambien
mo que en el siglo XIII se asociaron á los valden Flacco Albino, fueron publicadas por Andres Duches.
ses. Tal ha sido siempre la política de los sectarios, ne en París el año 1617, y en la forma que indica
con el fin de formar número y hacer frente á los cató. Bergier; pero la mejor edicion es la de Ratisbona he
licos. Por la misma razon se reunieron despues los cha en 1777, dos tomos en folio con notas y diserta
valdenses á los calvinistas, aunque no tuviesen la mis ciones. El padre Chiflet publicó tambien un escrito
ma creencia que ellos. cuyo título es: La confesión de Alcuino, el año 1656
2." De aquí mismo resulta queenel siglo XIll los albi en cuarto, cuya confesion conviene el P. Mabillon en
genses eran un conjunto de maniqueos, arrianos, pe que es de dicho sabio. Hay en las obras de Alcuino,
trobusianos, enriquistas y valdenses, bien poco acor— teolojía, filosofía, historia, cartas y poesias: se di
des sobre el dogma, mas reunidos por inieres y por visa en ellas una ciencia mas estensa que profunda.
el odio contra la Iglesia romana y su clero; que la ma Este autor tenia mas injenio que gusto, mas erudi
¿ parte de ellos eran tan ignorantes que apenas sa cion que elegancia, y era mas facundo que elocuen
ian lo que creian ó no creian. De aquí procede la di te; su estilo está recargado con palabras inútiles, sus
versidad de relaciones que han hecho los historiado pensamientos son vulgares, sus adornos afectados, y
res de aquel tiempo acerca de la doctrina de estos se apesar del artificio de su dialéctica, sus raciocinios
Clla C62S. difusos no tienen nervio, y á las veces ni esactitud;
3.° En los interrogatorios que se hicieron sufrir mas sin embargo, sus obras han sido siempre muy
á sus jefes, y en los concilios en que fueron condena estimadas, y sus doctrinas son sanas en todo lo con
dos, no fué facil descubrir y distinguir sus diferentes cerniente á la fé, y aprovecha con interés las oca
opiniones, ya sea por que estos predicantes no tenian siones de refutar los errores de los herejes.
doctrina alguna fija ó bien porque ocultasen con cui Se cree que Alcuino es el fundador de la escuela
dado las de sus errores que podian inspirar el mayor Palatina, llamada asi porque estaba en el palacio de
horror á los católicos. Carlomagno. La universidad en París entronca cen
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ella por una serie no interrumpida de maestros. Al or Jesucristo, ó por los apóstolesó por los doctores de
cuimo añadióá la escuela Palatina una especie de Aca a Iglesia. No se sigue de aquí que Dios, haya enga
demia, cuyos miembros tomaban el nombre de algun ñado á los escritores sagrados, ni que haya querido
¿ de la antigüedad. Carlomagno tenia, el de inducir á error á los judios, depositarios de las Es
crituras; se sigue solamente que no reveló á los an
avid, y Alcuino el de Flacco Albino. V. á Feller.
tiguos todo lo que se proponia hacer en la continua
Alegoría, discurso cuyo sentido está cambiado” cion de los siglos.
ó que bajo el sentido literal oculta otro sentido me Leemos en el Evangelio, Joann., c. 11, y. 9, que
nos facil de comprender. Esta voz viene del griego ALL. Caifás dijo á los sacerdotes y á los fariseos reunidos,
al hablar de Jesucristo: «vosotros nada sabeis: no
Agor Evoo que significa yo hablo de otro modo; es por
consiguiente una metáfora centinuada. La diferencia » veis que conviene que muera este hombre por el
entre una alegoría y una parábola es que la primera » pueblo, y porque no perezca toda la nacion». El Evan
encierra un sentido histórico ó literal verdadero, en gelio añade: «Caifás no dijo esto por su propia cien
vez de la segunda que es una especie de fábula, cuyos »cia, sino que como era en aquel año Pontifice, pro
personajes ó hechos no han existido jamas. »fetizó que Jesucristo moriria no solo por el pueblo
Así S. Pablo, á los Gálat. c. ...”y. 22, nos ense » sino para reunirá todos los hijos de Dios». Caifás
ña que lo que se dijo de los dos hijos de Abraham, de hizo pues una prediccion sin saberlo; su discurso fue
los cuales el uno habia nacido de una esclava y el una alegoría de la cual no comprendia todo el sen
otro de una esposa lejitima; es una alegoría que sig tido. Mas, ya sea que los escritores del antiguo Tes—
nifica las dos alianzas que habia hecho Dios con los tamento hubiesen comprendido todo el sentido de lo
hombres, de las que producia la una esclavos, y que referian, ó bien que no hubiesen visto mas que
la otra hacia nacer º hijos libres; que la ley que pro una parte de él, lo cierto es que no fueron ni engaña
hibia á los judios atar la beca de los bueyes que trilla dores ni engañados.
ban las mieses, significaba que losfieles debian contri Resta saber, si en el designio de Dios, toda la ley
buir para la subsistencia de los operarios evanjélicos. de Moises era figurativa; si se les puede ó debe dar
Esto no impide que no sea cierta la historia de los dos á todos los acontecimientos del antiguo Testamento
hijos de Abraham, y que la ley impuesta á los judios no un sentido alegórico, y mirarlos como otros lantos
debiera ejecutarse al pie de la letra. Por el contrario, tipos y figuras de lo que acaece en el nuevo. Ecsa
las parábolas de que se servia Jesucristo para instruir minaremos esta cuestion en la voz FIGURA Y FIGU
al pueblo, como la del hijo pródigo, la de la oveja per RSMO.
dida, etc, no son precisamente narraciones históricas,No solo muchos incrédu'os sino tambien algunos
sino unas ficciones, cuyo objeto es el de pintar la bon
autores cristianos, creyeron que las antiguas profe
dad y misericordia de Dios para con los pecadores. V.
cias no podian aplicarse á Jesucristo sino en un sen
PARÁBOLA. tido alegórico; que en el sentido literal pertenecian
Ademas del sentido alegórico de la sagrada Escri á otros personagés y á otros acontecimientos. Proba
tura, distinguen los intérpretes tambien un sentido remos lo contrario en el artículo PRoFECIA.
tropológico, que se refiere á las costumbres, y otro Asi como los antiguos, sobre todo los orientales,
sentido anagógico, respecto de las recompensas que deseaban hablar en parábolas, tambien gustaban es
nos prometé Dios en la otra vida. V. EscRITURA sA— presarse por medio de alegorías; les agradaba hallar
GRADA, S. 3. - en un acontecimiento cualquiera la figura de otro
De aqui han tomado ocasion algunos incrédulos acontecimiento. Uno de nuestros filósofos, escesiva
para concluir que los autores sagrados han escrito mente empeñado en ridiculizar los sagrados libros,
espresamente en un estilo enigmático, á fin de enga conviene en que era costumbre antigua en el Oriente
ñar á los oyentes y lectores: consecuencia bien poco no solo el hablar en alegorías sino aun el espresar,
reflecsiva. Cuando decimos que la Escritura sagrada por medio de singulares acciones, las cosas que se
tiene frecuentemente un sentido alegórico ó figurado, queria significar, y el pintará vista de los oyentes
no pretendemos que los escritores sagrados se hayan los objetos con que se queria herir su imaginacion.
propuesto siempre un doble sentido. No es cierto que Nada era, dice, mas natural; pues no escribiendo los
Moises, al hablar de los dos hijos de Abraham, com hombres por largo tiempo sus pensamientos sino en
prendiera que el uno era figura del pueblo judáico y geroglíficos, debian tomar la costumbre de hablar
el oro del pueblo cristiano; ni que al dar la ley de como escribian. No debemos pues estrañarnos de que
que hemos hablado, pensase en contribuir para la prescribiese Dios á los profetas ciertas acciones que
subsistencia de los predicadores del Evangelio. Pudo parecian ridículas, mas que eran muy capaces de es
haber ignorado el designio que tenia Dios al hacerle citar la atencion de los espectadores, y que eran muy
s ribir esla historia y publicar esta ley; y Dios se significativas.
reservó el revelárselo á los escritores del nuevo Tes— Asi que, el profeta Isaias anda por medio de Je
tamento. No pecó pues Moisés ni contra la sinceri rusalen con la desnudez de los esclavos, para anun
dad, como buen historiador, ni contra la sabiduría y ciar á los judios su suerte futura, Isai., c. 20; Jere
prudencia que deben suponerse en un legislador. Lo mias coloca un yugo sobre sus hombros, para mani
mismo podemos asegurar respecto de los profetas y festarles con anticipacion el que les impondria Na
demas historiadores sagrados; no tuvieron quizá to bucodonosor; envia unas cadenas á los reyes de la
dos á la vista otro sentido que el literal; mas esto no ldumea, de Moab y de Tiro, como símbolo de las
bsta para que no pueda habernos descubierto Dios. con que se les habia amenazado. Dios ordena á Oseas
ºjo a superficie de la letra, algun otro sentido, bien que se case con una prostituta, que la abandone du
 ALE 57 ALE
rante algun tiempo, y finalmente de volver á vivir de sentidos; y por tanto no son sino unas esplicacio
con ella, para retratar la conducta de Dios con nes arbitrarias y vanos discursos.
respecto á la nacion judáica, &c. Estas eran alego Nueva imprudencia . cómo no se vió que los incré—
rías muy patentes y se hallan algunos egemplos en dulos se prevaldrian tambien de esta observacion y
la historia profana la volverian contra los mismos apóstoles? Con efec
Puesto que era al el giro de las costumbres anti to, los incrédulos dicen que la pretendida inspira
guas; no es sorprendente que los judios diesen un cion no puede hacer real y positiva una cosa que es
sentido alegórico á los hechos que se refieren en la imaginaria, ni respetable lo que es ridículo, ni jus
historia sagrada. S. Pablo lo ha practicado mas de tificar un sentido en el que es evidente que jamás
una vez; los Padres de la Iglesia mas antiguos le pensaron el legislador de los judios y sus profetas:
han imitado, porque esta manera de instruir era á Barbeyrac toca probar lo contrario. Solo se infiere
agradable á sus oyentes. Mas los protestantes les han de su observacion que las esplicaciones alegóricas
acriminado esta conducta; dicen que este método, ri dadas por los Santos Padres no son artículos de fé;
dículo en sí mismo, no es bueno sino para paliar la pero quién lo pretendió jamás ? Los apóstoles no
ignorancia del predicador, hacer pasar ciertas visio mandaron estas esplicaciones, mas tampoco las pro
nes por verdades importantes, formar en los oyen hibieron, puesto que S. Bernabé y S. Clemente las
tes un gusto falso , y disuadirlos de la investigacion usaron frecuentemente; debemos presumir que es—
del sentido literal y natural de la sagrada Escritu los dos discípulos inmediatos de los apóstoles cono
ra. Tal es el fallo que sobre esto pronunció Barbey cian por lo menos tambien las intenciones de sus
rac, en el Tratado de la moral de los Padres, c. 7, maestros como les críticos protestantes del siglo
S. 6. y siguientes. Sostiene que el egemplo de los XVII ó XVIII .
apóstoles no pudo servir para justificar á los Pa 3." . Los apóstoles continúa el censor de los Pa
dres. dres, dieron ciertos sentidos alegóricos á la Escritura
1.º Los apóstoles , dice, han usado rara vez de santa, á causa de su condescendencia para con los
las alegorias, y los Padres se sirven de ellas contí judios que gustaban de este género de instruccion;
nuamente; los primeros se valieron de este recurso, mas no como un egemplo que deba seguirse: este
mas bien para manifestar en el antiguo Testamento gusto es pernicioso en sí mismo, porque nos aleja de
los misterios de Jesucristo, que para sacar de las ale la investigacion del sentido literal y verdadero de la
gorias lecciones de moral ; apenas se hallan dos ó palabra de Dios.
tres egemplos en S. Pablo, cuando los Padres no pre Jamás reconoceremos que un género de instruc
sentan casi otra clase de ejemplos. cion del que se sirvieron los apóstoles, sea perni
Sin embargo, S. Mateo ha tomado en un sentido cioso en sí mismo; mas sostenemos que los Santos Pa
alegórico lo menos veinte profecias del antiguo Tes. dres le nsaron por la misma razon, esto es, por con
tamento: esta es una lacha que le atribuyen los in descendencia para con sus oyentes. En efecto, des
crédulos; y Barbeyrac, sin saberlo, se ha tomado el pues de S. Bernabe y S. Clemente de Roma, los dos
trabajo de confirmario. S., Pablo ha convertido en Padres de la Iglesia mas inclinados á este género de
leccion de moral, no solo la ley del Deuteronomio, instruccion, fueron S. Clemente de Alejandria y Orí
de que hemos hablado, i que prohibia servirse genes; uno y otro instruian y escribian en Egipto:
del pan recogido en la celebración de la pascua, si— luego los judios de Alejandría estaban acostumbra
no ademas la ley de la circuncision, la del sábado, dos á las esplicaciones alegóricas de la sagrada Es
la de las abluciones, la de las abstinencias, las pro critura, como lo testifican los escritos de Philón.
mesas hechas á Abraham, las reprehensiones y ame— Los egipcios no esladan en general menos habitua
nazas dirigidas á los judios por Isaias, etc. Por lo que dos por el uso de sus geroglíficos.
los judios modernos acriminan á S. Pablo, dicen que Otra prueba de la razon con que se han conduci
este es un espediente imaginado por este Apostol, pa do los Padres en este punto es que uo se limitan
ra ecsimir á sus prosélitos de la observancia de la ley al sentido místico ó alegórico de la Escritura santa.
ceremonial. Es sensible que no viese Barbeyrac que Orígenes, antes de recurrir á este medio, esplica muy
autorizaba la preocupacion de los Judios. frecuentemente el sentido literal del testo, y son bien
S. Pedro, Epist. 1, cap 2, y. 6, convierte en lec notorios los trabajos emprendidos por este hombre
cion de moral la profecia de Isaías c. 8, y. 14, con sabio para confrontar el testo hebreo con las versio
cerniente á la piedra angular que destruye á los nes. S. Gregorio Niseno, despues de haber tomado de
incrédulos; la de Oseas, c. 2, y.2%, que se refiere á la ley de Moisés un gran número de alegorias, con
los judios vueltos á entrar en gracia con Dios; el ejem cluye de este modo: «lo que acabamos de proponer
plo de los pecadores esterminados por el diluvio, y se reduce á meras congettiras; las abandonamos al
compara el bautismo con el arca de Noé, c. 3, y. juicio de los lectores; si las desechan, no reclamare
20, &c. Estas clases de lecciones no son pues tan mos; si las aprueban no estaremos por esto mas con
raras en los escritos de los apóstoles como pretende tentos y satisfechos de nosoros mismos.» Lib. de Vi
Barbevrac. ta Mosis, pág. 223. S. Agustin, poco tiempo des
2.º. Dice, que como eran inspirados los escrito pues de su eonversion, habia escrito dos libros sobre
res sagrados, debemos creerlos cuando nos descu el Génesis contra los maniqueos, en que habia dado
bren un sentido alegórico en un hecho ó en una ley, razones alegóricas de la mayor parte de los hechos,
en donde no lo hubiéramos apercibido; mas que no porque no reo yo, decia cómo sea posible entenderlos
mandaron á persona alguna hiciese lo mismo, y que en el sentido propio. Mejor instruido despues, com
no dieron ninguna regla para descubrir esta clase puso otra obra sobre el Génesis, tomado en el senti
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do literal del Génesis á la letra. Si Beausobre hu por el contrario frecuentemente son castigadas; esto
biera procedido de buena fé, debiera hacer esta ob es muy diferente. Los hombres no son impecables,
servacion antes de censurar á S. Agustin, Hist. del mas los dioses debian serlo; todas las acciones de los
Manich., tom. 1. lib. 1. c., pág. 283. primeros no son unos egemplos que se deban seguir;
No es pues nada á propósito el vituperar por esta mas se podia ser culpable en imilar á los dioses? No
conducta á los Santos Padres de la Iglesia; ¿se quer— tenemos pues necesidad de alegorias para esplicar la
ria que hubiesen adoptado otro método para"instruir, embriaguez de Noé, el incesto de Loth con sus hijas,
que hubiera desagradado á sus oyentes, y que por lo el engaño que Jacob usó con su padre para alcanzar
tanto no habria sido escuchado? Juzgar del gusto del su bendicion, el adulterio y el homicidio de David, etc.
segundo y tercer siglo de la Iglesia por el del décimo pues que no estamos obligados á justificarlos.
oclavo, es un absurdo. En segundo lugar, los Padres Hemos evacuado las citas de los Santos Padres que
no pensaron en formar sabios, sino cristianos virtuo— se nos han opuesto; la mayor parte son falsas: véase
sos; querian acostumbrarlos á buscar en los libros san todo lo que hay de cierto en esté punto.
tos, no precisamente erudicionó cierlos conocimientos S. Clemente alejandrino, Strom. l. 2, c. 19 pág.
profanos sino lecciones de moral y de objetosde edifica 81, dice que el modo con que Dios obró respecto de
cion; nosotrossostenemos que los Santos Padres no co Adan, de Noé, de Abraham, de Jacob y de Esau, era
melian en este caso injusticia alguna. Gracias á la profético y típico; idéntico es el parecer de S. Pablo
obstinacion de los hereges y de losincrédulos, no es es respecto de estos dos últimos.S.Clemente concluye por
to ya lo que se quiere en el dia; se exigen obsevacio las palabras de Jacob : porque Dios tuvo piedad de mí,
nes gramaticales, críticas, históricas, filosóficas, cro me ha dado todo cuanto yo poseo, l. 6, c. 15, p. 803.
nologia,¿ física é historia natural, para espli Observa que segun el Evangelio, Jesucristo no habla
car los libros santos. Somossin duda en todasestas cla ba sino en parábolas; concluye que puesto que Jesu
ses de conocimientos mas hábiles que nuestros padres; cristo es tambien el autor de la ley y de los profetas,
ro somos mejores cristianos por esto? Estas sabias ha hablado del mismo modo en parábolas. S. Clemen
iscusiones estan por ventura al alcance del pueblo? te da por razon de esto: 1º. que por este medio qui
Luego, principalmente al pueblo es á quien los San so Dios excitar nuestra vigilancia y curiosidad; 2.”
los Padres debian y querian instruir. El éxito basta por que muchos hubieran abusado de un estilo mas
para convencernos de que fueron mas felices en la claro; 3 º porque este era el método mas antiguo y
egecucion de su empresa que sus acusadores. Los sa eneral de enseñar; ...º porque el estilo de los he
bios comentarios de los protestantes no han conduci reos es comunmente figurado. Mas añade que los
do á otra cosa, que á multiplicar entre ellos las dis hombres verdaderamente inteligentes son aquellos
pulas, las sectas y los errores: los de los Padres de a que entienden la Escritura santa segun la regla ecle
Iglesia han formado hombres virtuosos y santos. siástica. Por consiguiente no admite las esplicaciones
Lo que hay de mas singular en este asunto, es que arbitrarias, y no se sigue de aqui que todo sea pará
los protestantes que censuran con tanta acritud el bola ó alegoria en la Escritura sagrada.
gusto de los antiguos Padres por las alegorias, estan Orígenes, hablando de la distincion de los anima
sin embargo tan atentos y ¿ para aprove les puros é impuros, Hom. 7. in Levit. n. 5. dice que
charse de las esplicaciones alegóricas que S. Clemen si se entendiesen como los judios y como el pueblo las
te de Alejandria, Orígenes y Tertuliano dieron algu leyes que Dios habia dado sobre este objeto, aparece—
nas veces á las palabras de Jesucristo tocante á la Eu rián menos razonables y menos respetables que las de
caristia. los atenienses, de los Sparciatas ó de los Romanos;
Mas es bueno el ver cómo su prevencion contra los mas que si se las enliende segun el sentido que enseña
Padres les ha hecho dar la preferencia á los incrédu la Iglesia aparecerán verdaderamente divinas y supe
los. No es nada á propósito, dice uno de ellos, que los riores á todas las leyes humanas L. 2, in Epist. ad
apologistas del cristianismo hayan querido probará Rom. n. 9. Pregunta qué pueden tener de comun con
los paganos lo absurdo de su religion por medio de la la ley natural, aquellas que ordenan la circuncision,
necesidad de recurrir á las alegorias para disipar el las que prohiben hacer un de lino y de lana , ó
escándalo de sus fábulas; ¿no estamos nosotros en el de comer ¿ recogido en la fiesta de las pascuas. Di
mismo caso respecto de la mayor parte de los hechos ce que habiendo preguntado á ciertos judios la razon
del antiguo Testamento? Los Padres de la Iglesia lo y la utilidad de estas leyes, no le dieron otra que la
han conocido, pues que todos alegorizaron y se con— voluntad del legislador. No se sigue de aqui que Orí
vinieron en que sin este método era imposible enten— genes queria que se tomasen tambien en un sentido
der la Escritura santa. Para probarlo cita á S. Cle alegórico las demas leyes, cuya razon era clara y sen
mente de Alejandria, áOrígenes, á Tertuliano y á San sible, y las leyes morales contenidas en el Decálogo.
Agustin. El furorpor las alegorias ha hecho divinizar Nos parece que se ha juzgado á este Padre con de
el cántico de Salomon : los mahomelanos hicieron lo masiada severidad, cuando se quiso inferir de esto
mismo para paliar los absurdos del Alcorán. que destruia frecuentemente el sentido literal de la
En vano ecsigiriamos nosotros á los censores de los sagrada Escritura; no era pues destruirle el manifes
Padres una respuesta sólida á esta objecion; no es tar ó confesar que no le veia.
entre ellos donde iremos á buscarla. Las acciones in Tertuliano lib. 5, contra Marcian, c. 5. dice que
fames y escandalosas, referidas en las fábulas, eran nada aparece mas ridículo ni mas despreciable que
atribuidas á los dioses: ¿se podia condenarlas ó vitu— los sacrificios sangrientos, las purificaciones, la ley
perarlas? Si hay en la historia acciones semejantes del talion, la circuncision y las abstinencias; que por
son atribuidas á los hombres, y no son aprobadas; tanto todo herege hace risible el antiguo Testamento
 ALE 89, ALh.

en su totalidad; mas que Dios ha ocultado bajo estos considera como hombres felices sino á los que sirven
enigmas y estas figuras una sabiduria que debia ser al Señor, á los que conocen y meditan su ley y á los
revelada por Jesucristo. Sin embargo, Tertuliano, en que conforman con ella su conducta. S. Pablo exhor
esta misma obra da unas razones escelentes acerca ta del mismo modo á los fieles á regocijarse en el Se
de las abstinencias prescriptas á los judios, de la dis— ñor, Philipp. c. 3, y. 10, c., y ..., á cantar con
tincion de los animales puros é impuros, de la multi todo su corazon himnos y cánticos para alabará Dios.
tud de los sacrificios y ofrendas. Luego cuando dijo Eph., c. 5, y . 19.: Colos; c. 3, y. 16. Dice que el rei
que todo esto tomado á la letra era ridículo y despre no de Dios en este mundo no consiste en los deleites
ciable, quiso dar á entender que esto pareceria tal á sensuales sino en la alegria y la paz del Espíritu San
los hereges, y no á los fieles instruidos por Jesucristo. lo. Rom., c. 1, y. 17. Protesta que en medio de los
Aun cuando hubiera querido decir de toda la ley ce trabajos y penas del apostolado, está lleno y transpor
remonial lo que los incrédulos le atribuyen, tampo tado de alegria 2." Cor. c. 7. y. .
co se seguiria que opinó del mismo modo acerca de Los Santos, en todos los siglos, han repetido esto
todo el antiguo Testamento. - mismo. Los que habian traido desde luego una vida
S. Agustin, lib. contra mendacium, ad consen. c. poco cristiana han asegurado, despues de su conver—
10, n. 23 y 24, sostiene que Abraham é Isaac no min sion, que esperimentaban un regocijo mas dichoso, y
tieron, cuando digeron que sus esposas eran sus her que gustaban de una alegria mas dulce y mas pura
manas, como ni tampoco Jacob, al asegurará Isaac que la que tenian cuando anteriormente se entrega
que era él su hijo primogénito, porque estas eran fi ban al placer. Todos estos hombres virtuosos han si
guras, tipos ó matáforas. No opinamos que sea esta do impostores, ó ha cambiado de naturaleza el cris
una escusa sólida; porque un equivoco, empleado pa tianismo, para que haya llegado á ser una religion
ra engañará alguno, es una verdadera mentira; mas triste y lúgubre?
no se puede inferir que segun S. Agustin, toda la his Que Dios, movido de compasion hácia el género hu
toria santa es figurativa alegórica, y que sin el recur mano se dignó enviar y entregar su hijo único para
so de las alegorias, seria imposible entenderla. salvarnos; que, por los méritos de este divino Reden
No es empresa dificil el refutar á Woxtoon, que tor distribuye mas, con mayor ó menor abundancia á
pretendia que los milagros de Jesucristo, debian to todos los hombres gracias para conducirlos á la salva
marse en un sentido puramente alegórico, y que ba cion; que tengamos por juez á un Dios, que quiso ser
jo este aspecto fueron considerados por los Padres. nuestro hermano, á fin de ser misericordioso Hebr.,
V. el sentido literal de la Escritura santa defendido c. 2, y. 17, que los sufrimientos inevilables á la na—
por Stakhouse, etc. turaleza humana puedan llegará ser para nosotros el
No es pues el gusto por los alegorías el que ha he principio de una eterna felicidad, etc.: ved aquí unos
cho divinizar el cánticó de Salomon; por el contrario dogmas que no estan ciertamente destinados para
la costumbre del estilo alegórico usado en todo tiempo horrorizarnos y entristecernos, sino para regocijar—
entre los orientales, es la que ha hecho escribir asi nos y consolarnos; y estos son precisamente los dog
esta antigua obra, monumento original de costumbres mas fundamentales del cristianismo.
sencillas é inocentes que reinaban por entonces. La Convenimos en que para establecer su creencia fue
Iglesia cristiana la ha recibido como un libro divi necesario que los apóstoles y los primeros fieles se es
no, apoyada en la fé de la tradicion constante de los pusiesen á las mas duras pruebas, aun á perder la
judios, transmitida por los apóstoles, y su testimonio vida en los tormentos: estos son seguramente los ob—
no tiene necesidad de otra garantia. jetos de Iristeza y de lágrimas que Jesucristo les habia
No es cierto que los mahometanos recurriesen á las anunciado; mas tambien les predijo que su tristeza se
alegorías para paliar las paradojas é indecencias con convertiria en alegria, Joan., c. 16, y. 20: no les
tenidas en el Álcorán; hacen profesion de creerlas engañó.
al pie de la letra, tales como su pretendido profeta Si el parecer de un filósofo pagano puede hacer ma
las escribió; y aun cuando quisieran usar de este pa yor impresion sobre los incrédulos, que el de los au
liativo, no conseguirian jamás darlas la menor apa lores sagrados y de los Santos de todos los siglos, les
riencia de buen sentido. Véase Marracci, Prodomus invitamos á que lean el tratado de Plutarco contra los
ad refut. Alcoranni, y ManowETIsmo. epicúreos, en el que se dedica á probar que no se
puede vivir feliz siguiendo la doctrina de Epicuro; que
Alegria. Una de las acusaciones mas comunes es una locura el privarse de los consuelos que da la
que los incrédulos dirigen á la religion, es la de que religion sea durante la vida, ó al tiempo de morir.
sus dogmas, su moral y sus prácticas, parecen forma Era este filósofo un entusiasta, un insensato ó un
dos para entristecernos, para privarnos de toda es espíritu débil, tal como los incrédulos acostumbraron
pecie de alegria y de placeres; que la piedad ó la de á pintar á los santos del cristianismo? Al menos debe
vocion no es otra cosa en el ¿ que un acceso de rian intentar responder á los argumentos de Plutar—
melancolía; que un cristiano regular y fervoroso debe co; mas ninguno de ellos lo ha emprendido toda
ser el mas desgraciado de los hombres. Vd.

Esta preocupacion conviene muy poco con el len o S" Los detractores del cristianismo no dejan de
guage denuestros libros santos. Contínuamente exhor acusarle de ridículo, monacal y tétrico. Quisieran que
ta el Salmista á los adoradores del verdadero Dios á la religion fuese un festin contínuo en que tomáran
que se regocijen, y á que se entreguen á los mas dul asiento los desórdenes y las estravagancias. Todo lo
ces transportes de alegria; invita á todos los hombres que no es lujo, disipacion é inmoralidad lo reputan
á gustar y esperimentar cuán dulce es el Señor; no como indigno del hombre y de la sociedad. Al oirlos
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se diria que la virtud es un tormento, y que todo3 los Sea lo que se quiera, no se puede ignorar en Ale
goces se disipan ante la observancia de los preceptos. jundria, ciudad ¿ de judios, lo que aconteció en
Se fingen un mundo en el cual no hay mas deleites que Judea mil y setecientos años antes: habia un comer—
los sensuales, ni mas deslino que el satisfacer las pasio cio habitual entre Alejandria y Jerusalén, y una Si
nes y los apetitos brutales. Y cosaestraña! Estos hom nagoga en esta última para los alejandrinos. Act., c.
bres que compadecen como á desgraciados á quienes 6, y . 9. Si S. Marcos hubiera relerido hechos imagi
practican la virtud, ignoran hasta qué punto son ellos narios en el Evangelio que escribió para la instruc
mismos compadecidos por la razon ilustrada del hom cion de los nuevos fieles, le hubiera sido muy facil á
bre religioso! Así se entiende que no comprendan lo Apolo, discípulo de S. Pablo, que era de Alejandria,
que es, en lo que consiste, y cómo se alcanza la ver probar la falsedad de estos hechos Act. c. 18, y.2.
dadera alegria. La definen por goces que desaparecen Las turbulencias que causaron la ruina de Jerusalén
y dejan despedazado el corazon: búscamla, ya en el no se hicieron sentir en Egipto; la Iglesia naciente pu
ruido de los saraos, ya en las competencias, ya en el do gozar de una larga tranquilidad. S. Marcos tuvo
concurso, ya en las atisfaciones del capricho , ya en una serie no interrumpida de sucesores, de los que
fin en las glorias y en la ambicion; y cuando al abra Eusebio ha formado la lista; la tradicion apostólica
zar estos ídolos pa'pan su vanidad y su engaño, ó debió conservarse largo tiempo sin alleracion en esta
bien estrechan un monstruo erizado de puntas, no glesia patriarcal. Se sabe que Alejandria era una de
contemplan que bajo la sonrisa de los halagos munda - las ciudades en donde las ciencias eran mas cultiva
noslaestá
de disfrazado el gran secreto de la amargura y das; habia una escuela de filosofía Panthaeuns, Cle
desesperacion. u

mente Alejandrino y Orígenes fueron instruidos en

Preguntad por qué va decrépito y encorvado el jó— esta ciudad, y dieron despues en ella lecciones. No
ven, por qué llora la doncella, por qué la sociedad en es pues en las tinieblas ni bajo el velo de la ignoran
tera presencia tan la nenlables desastres y escándalos cia como se estableció el cristianismo en Alejandria.
tan ¿ y esta investigacion os definirá por Los que creyeron en Jesucristo, no lo hicieron sin ha
antítesis la alegria. Por cierto que la incredulidad ha ber sido informados de la veracidad de los hechos
podido conocer que en los anales de sus satisfacciones, publicados por los apóstoles. No es dudoso que esta
de sus triunfos y regocijos, hay no sé que fondo de Iglesia tuviera una liturgia que la era propia, y es
amarga ¿? que mas bien horroriza que muy probable que fuese la que apareció con el tiempo
divierte; y si todavia divisa la incredulidad víctimas bajo el nombre de S. Marcos. Hablaremos de esto en
en el claustro, en la profesion cristiana y en la vi la palabra LiTURGA.
da práctica de la virtud, perdonémosla su mal enten Ninguna de las antiguas Iglesias fue tan agitada
dida compasion, y el contra sentido infernal de sus como la de Alejandria. Esta ciudad grande, rica y
principios. populosa estaba dividida en tres religiones, el paga
La paz interior, la meditacion, el comercio con mismo, el judaismo, y el cristianismo, y sus habitantes
Dios, un suspiro que el alma eleva hácía el trono cle eran naturalmente sediciosos y violentos. Por esta
mente y misericordioso del Allísimo, son acentos de razon los emperadores se vieron obligados á otorgar
alegria que no alcanza á percibir la incredulidad. Tal amplia autoridad al obispo; su jurisdiccion se esten
vez tiene por fanatismo una plegaria, y por pesadilla dió bien pronto sobre todo el Egipto. La celebridad
el ¿ un corazon devolo! Quien asi califica las de la escuela de Alejandria conlribuyó tambien á
cosas, no es muy á propósito para intérprete de los darles la mayor consideracion entre los demas obis—
verdaderos goces del alma. El cristianismo pues, hi pos; por lo mismo que este puesto era mas importan
jo del cielo, alegre, risueño, dulce y consolador, co ie estaha mas espuesto á frecuentes peligros. Desde
mo el Dios que lo habila, hace del corazon de sus el principio del siglo III, la ordenacion de Orígenes
buenos hijos un lesoro de goces y de alegrias que que pareció irregular á los obispos de Alejandria,
no alcanza á comprender la incredulidad. Este mons les dió un molivo de turbar el reposo de este gran -
truo negativo quisiera alejar del mundo to la idea de hombre, otros le protegieron, en particular Dio
positiva de ventura y de porvenir. Blasfema de lo que nisio, que ocupó esta silla hácia el año 250; mas
ignora; no conoce, el cristianismo ni la alegria, y este último fue acusado á su vez de haber prepara
calumnia la obra de Dios, maldiciendo susfrulos. Solo do los medios para el error de Arrio. El año 306 el
faltaba que los incrédulos se constituyesen maestros cisma de Melecio dividió esta lgesia, y el año 320
en la ciencia del espíritu; ciencia en que tanto apro comenzó Arrio á publicar en ella su heregia. Se sabe
y echan los dóciles, los humildes, pacíficos y senci cuántos desórdenes causó esla en toda la Iglesia, y
llos, cuanto ignoran y calumnian los orgullosos y á qué persecuciones fue espuesto S. Atanasio, por
rebeldes hijos de la soberbia redulidad que sostenia con celo la divinidad de Jesucristo. Teo
filo, uno de sus sucesores en 385, fue enemigo de S.
Alegria. No vamos á tralar de otra cosa mas Juan Crisóstomo y aumentó las disensiones que rei
que de la Iglesia fundada en esta célebre ciudad. Se naban anteriormente entre los obispos de Alejandria
gun todos los monumentos antiguos de la historia
y Constantinopla. El episcopado de S. Cirilo, sobri
eclesiástica, S. Marcos, discípulo de S. Pedro, fue no y sucesor de Teófilo fue muy borrascoso; Nesto
¿ predicó el Evangelio en ilejandria, y donde fun rio á quien condenó el concilio de Efeso en 31 y
ó una Iglesia. M. Valois opina que acaeció en el año contra el cual escribió, tuvo muchos partidarios que
noveno del emperador Claudio, cerca de diez y siete acusaron á S. Ciririlo de eutiquianismo. Dióscoro, que
años despues de la muerte de Jesucristo: otros colocan le sucedió, abrazó abiertamente el partido de Eutiques;
este acontecimiento diez años despues, resistió á las decisiones del concilio de Calcedonia.
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habido en el año 51 y atrajo todo el Egipto á su canto de la aleluya en el oficio y misa de los difuntos,
cisma. Cuando se quiso colocar sobre esta silla los como tambien desde septuagésima hasta el gradual
obispos católicos, los Alejandrinos asesinaban á uno y de la misa del sábado santo, y sustituyó estas pala
arrojaban á otro. Durante mas de un siglo, los em bras: Laus tibi domine, Rea deternaº gloria, como se
peradores emplearon en vano toda su autoridad pa practica aun al presente. El cuarto concilio de Tole—
do, en el cánon once, hizo de esto una ley espresa que
ra establecer la paz; sus esfuerzos no sirvieron mas
que para irritará los egipcios contra el gobierno. El fue adoptada por las demas iglesias dejÓecidente,
año 630 el Patriarca Ciro fue el primer autor del mo San Agustin, en su epístola 119 ad Januar, obser
notelismo, y cuatro años despues los mahometanos va que no se cantaba la aleluya en otro dia que en el
conquistaron y arruinaron el Egipto. Basnage, en su de Pascua. No hizo mas que referir el uso de su siglo.
Historia de la Iglesia, lib. 2, se estendió largamente En la misa mozárabe se cantaba despues del Evan
sobre este cuadro; su designio era probar que los mas no en todo liempo; en vez de que en las
obispos de Alejandria no habian reconocido jamás la emas iglesias se cantaba como al presente en el in
jurisdiccion del romano Pontífice, y que nunca se ha lermedio de la Epístola al Evangelio, esto es, en el
¿ sometido á dicha autoridad. No es á propósito gradual. Sidonio Apolinar observa que los galeotes ó
este lugar para discutir todos los hechos de que quie remeros cantaban en alta voz el aleluya como una
re sacar ventaja; mas aun cuando hubiera sido me señal para escitarse y alentarse en sus maniobras.
jor probada la independencia de estos obispos, ¿qué En efecto, los primeros cristianos, acostumbraban á
resultaria de esto? Los tristes efectos que produjo santificar su trabajo por medio del cántico de los
bastarian para demostrar contra los protestantes la himnos y de los salmos. Bingham, orig. Ecles., t, 6.
necesidad de un centro de unidad en la fé y de un lib. 1, cap. 11, S. .
superior en el episcopado; puesto que, por haber co
metido la falta de no reconocer á uno como superior, Alemania. Si se considera esta parte de la
los Patriacas de Alejandria vieron su Iglesia com Europa en toda la estension que se la da al presente,
batida sin cesar por cismas y heregias, hasta que fi no se convirtió á la fé cristiana en el mismo tiempo.
nalmente el cristianisno quedó casi enteramente abo San Bonifacio, arzobispo de Maguncia, natural de n—
lido; solo existe en la actualidad un débil resto entre glaterra y religioso benedictino, es considerado como
los coftos y aun muy desfigurado por la ignorancia y Apóstol de Alemania; por sus continuos trabajos des
el error. V. Corros, Egipto. de el año 715 hasta su fallecimiento acaecido el año
El abate Renaudot dió á luz una historia de los pa de 755, los Germanos cercanos al Rhin, esto es, los
triarcas de Alejandria, desde la fundacion de esta habitantes de la Turingia, de la Hese, de la Frisia ó
Iglesia hasta el siglo XIII. Frisinga , y aun de la Baviera fueron sólidamente
convertidos al cristianismo, y fueron fundados los
Aleluya, nombre hebreo que significa alabad al primeros obispados de esta parte occidental de la
Señor. Alemania. Su apostolado fue coronado con el marti
San Gerónimo fue el primero que introdujo la voz rio: los bárbaros le asesinaron con cincuenta y dos
aleluya en el servicio de la Iglesia; durante largo de sus compañeros, parte de ellos misioneros y parte
tiempo no se empleaba esta voz mas que una vez al cristianos; su sangre fue una semilla que produjo otros
año en la Iglesia latina, á saber, el dia de Pascua; pe apóstoles, Los protestantes ni aun se han atrevido á
ro tenia mayor uso en la Iglesia griega, en que se disputar ó poner en duda su celo, sus trabajos, su va
cantaba en la pompa fúnebre de los santos, como lo lor y sus progresos; mas como este santo misionero
testifica espresamente S. Gerónimo al hablar de la de predicó el cristianismo católico y no el protestantis
Santa Fabiola; esta costnmbre se conservó en esta mo, se ha debido tener á bien el deprimir el esplen
iglesia, donde se canta tambien aleluya algunas dor de sus virtudes y el emponzoñar, al menos, el
veces durante la cuaresma. móvil de sus acciones. «Bonifacio, dice Mosheim,
San Gregorio el Magno ordenó que se cantase obtuvo por sus trabajos y por sus piadosas hazañas
tambien todo el año en la Iglesia latina; lo que dió el honroso título de Apóstol de la Germania; y lo me
ocasion á que algunas ¿ e echasen en cara reció ciertamente por los señalados servicios que
de que era demasiado adicto á los ritos de los grie restó al cristianismo; mas este eminente prelado
gos, y que introducia en la Iglesia de Roma las cere ue un apóstol á la hechura moderna; se separó en
monias de la de Constantinopla; mas respondió el muchas ocasiones del escelente modelo que tenia en
santo que tal habia sido anteriormente el uso en Ro la conducta y en el ministerio de los primeros y ver
ma, aun en el tiempo que el Papa S. Dámaso, que mu daderos apóstoles. Sin contar con su celo por la glo
rió en 38%, introdujo la costumbre de cantar la ale ria y autoridad del romano Pontífice, que igualaba, si
luya en todos los oficios del año. Este decreto de San acaso no escedia, al que tenia por el servicio de Cristo
Gregorio fue recibido de tal suerte en toda la Iglesia de y por la propagacion de su religion, se le afean otras
Qccidente, que se cantaba la aleluya aun en el oficio muchas cosas indignas de un verdadero ministro
de los difuntos, como lo observó Baronio en la des cristiano. Al combatir las supersticiones paganas no
cripcion que hizo del entierro de Santa Radegunda. empleó siempre las armas de que se sirvieron los anti
Se ve todavia en la misa mozárabe, atribuida á San guos heraldos del Evangelio para hacer triunfar la
Isidoro de Sevilla, este introito de la misa de difuntos: verdad, sino qre empleó frecuentemente la violencia
Tu esportio mea, domine, aleluia; in terra viventium y el terror, y aun algunas veces el artificio y el en
aleluia. gaño para multiplicar el número de los cristianos.
Andando el tiempo, la Iglesia romana suprimió el Yo añadiré que sus escritos anuncian un carácter
TOM0I, 1.
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imperioso y arrogante, un espíritu trapacero y falaz, ra aterrar á los bárbaros y obligarlos á hacerse crís
un celo escesivo por acrecentar los honores y pre tianos? Lejos de esto, ni aun quiso que sus compañe
tensiones acerca del órden sacerdotal, y una profunda ros hiciesen la menor resistencia cuando fueron, á
ignorancia de muchas cosas, cuyo conocimiento es ab asesinarlos los Frisones; su dulzura, su paciencia y
solutamente indispensable á un apóstol, y sobre todo su resignacion á la muerte están bien comprobadas
de aquellas que tienen por objeto la verdadera natu en sus carlas., Vidas de los Padres y de los Már—
raleza y el verdadero genio de la religion cristiana.» tires, 5 de junio.
Hist. ecles. 8.", siglo, 1.° p., c. 1, S. ... lnstruidos l.” Tampoco han podido jamás probar su carác
por medio de este cuadro, no han titubeado en decir ter maligno y falaz ni los artificios y fraudes que di
nuestros incrédulos franceses que los misioneros de la cen eumpleó para multiplicar el número de los cristia
Alemania predicaron el papismo y no el cristianismo; nos. Si por fraudes enlienden los protestantes las re
liquias, las indulgencias, el purgatorio, la confesion
que fueron los emisarios, los satélites, los esclavos de
los Papas, mas bien que los enviados de Jesucristo; y aun los milagros, confesamos desde luego que los
de lo cual debemos concluir que los bárbaros no obra puso en práctica; pero es preciso empezar por de
ron tan mal al asesinarlos; mas no creemos que nos mostrar que esto es un fraude, y que el mismo San
sea muy dificil el justificarlos. Bonifacio no tenia ninguna fé en todas estas cosas.
1.º Es un absurdo el creer que S. Bonifacio Estos pretendidos fraudes se diferencian un poco de
haya predicado en Alemania otro cristianismo y las mentiras; imposturas y calumnias de que han
otra religion que en la cual habia sido edu echado mano los predicadores del protestantismo para
establecerlo.
cado é instruido, y de cuya verdad estaba bien pene—
trado; que hubiera establecido el pretendido cris— 5." A pesar de que hemos tratado de encontrar
tianismo de Lutero y de Calvino ochocientos años en las cartas de este santo obispo, ó en otra parte,
antes de que este hubiera sido forjado. Es una ne vesligios del carácter imperioso y arrogante que se le
cedad el considerar como malo que haya creido atribuye, no hemos visto jamás otra cosa que testi
firmemente en la autoridad del Papa, y que la esta monios de lo contrario. Era sí muy celoso por el honor
bleciera en la iglesias de Alemania, siendo asi que y regalias del orden sacerdolal; pero este crímen le
tal era entonces la fé y creencia universal de todo el era comun con S. Pablo, que decia: «En tanto que
Occidente. Si hubiera obrado de otra suerte seria » yo sea apóstol de las naciones honraré mi minis
preciso acusarle de mala fé y de infidelidad á su mi »lerio.» Rom. c. 11, y 13; y á Tito c. 2, y. 15: «Que
nisterio. La única prueba que se alega del esceso de su »ninguno os desprecie.». Nunca se abrogó S. Bonia
celo en este punto, es que, segun los autores de la His cio tanta autoridad sobre las iglesias que fundó, co
toria literaria de Francia, «S. Bonifacio en sus car mo Lutero y Calvino sobre las que pervirtieron. An
» las espresa su adhesion á la santa Sede, en términos fes de su muerte se dió un sucesor á la silla de Ma
» poco decorosos á la dignidad del carácter episcopal.» guncia, y le dejó enconmendado el gobierno de esta
Pero no debe admirar á nadie el lenguaje consig— iglesia cuando se marchó á continuar sus misiones
nado en aquella época, porque la autoridad de entre los idólatras: no dió á los obispos mas autoridad
Papas era mayor en el siglo octavo que no lo es en el que la que ya gozaban en todo el Occidente.
dia; y ya veremos en la palabra PAPA que esto 6.” Por último, aun cuando los misioneros de
era necesario é indispensable en aquellas circuns Alemania hubieran dado algun motivo para las crí
tancias. ticas de los protestanles, lo que no aconteció, estos
2.º. Es tambien otro absurdo el concluir de aqui últimos serian tambien injustos y aun bárbaros al
ue el celo de S. Bonifacio era mayor por la autori tratar de oscurecer la gloria de los operarios evan
¿ del Pontífice romano que por la gloria de le élicos, que instruyeron y civilizaron á sus antepasa
sucristo y por la propagacion de su religion. Este os: si no hubiera sido por sus trabajos, cuándo ha
sanlo misionero creia firmemente que la autoridad bria establecido Lutero en esos paises su pretendida
del Papa habia sido establecida por Jesucristo mismo, reforma ? Ninguno de sus predicadores ha ido á dar
que era necesaria para la propagacion de la fé y pa á conocer el Evangelio entre los bárbaros; y ya sa
ra mantener la unidad de la iglesia, que no se podia bemos los resultados que han obtenido sus sucesores
estar sinceramente sumiso á Jesucristo sin obedecer cuando han querido hacer el papel de apóstoles To
á su vicario en la tierra: su celo por esta autoridad dos sus conocimientos se reducen á denigrar y calum
era un verdadero celo por la gloria y el servicio de niar como sus predecesores.
Jesucristo. Aun cuando S. Bonifacio hubiera pade No nos detendremos en refutar el absurdo de Bru—
cido un error, lo que no sucedió, seguiria en esto la ker, que vitupera á S. Bonifacio el no haber hecho un
corriente del siglo, y su conducta estaria en un todo servicio á las letras y á la filosofía, llevando el cristia
conforme con su creencia. nismo áAlemania; se enfurece contra los benedictinos,
3.° Qué pruebas tienen para decir que empleó la porque han dicho ¿ estaba dotado de erudicion y ca
violencia y el terror, para subyugar á los paganos y acidad, y le han alabado por haber establecido escue
hacer triunfar la verdad? Ninguna: tan solo nos ha ¿ en los monasterios de Fulda y de Fritzlar. Con este
cen observar que fue secundado por la poderosa pro— motivo confirma lo que han dicho los autores protes
teccion y animado por las liberalidades de Cárlos tantes acerca de la ignorancia de este misionero, y
Martel, y de Carlo—Magno y Pepino sus hijos. Es cier trae como pruebas de esto mismo, no solo sus cartas,
to que tenia necesidad de ellos para fundar los obis— sino lo que de él refiere Aventino, que asegura que
pados, los monasterios y las escuelas; pero porventura, S. Bonifacio fue el que denunció al Papa Zacarias, á
estos príncipes le dieron una escolta de soldados pa Virgilio de Saltzburgo como herege, por haber di
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cho que ºcsistian antípodas. No creemos que la inten odemos encontrar la felicidad suprema. Véase Co"
cion de los benedictinos haya sido la de demostrar ¿ c. 1, y. 15. y sig.
que S. Bonifacio era un gran filósofo, y que estable
ció escuelas de filosofía en Alemania para los germa Aurabeto, griego y latino, Caractéres ó letras
nos que no sabian leer. Este celoso misionero era para el uso de los griegos y de los latinos que, en la
tan instruido como podia serlo en el siglo VIII; habia consagracion de una iglesia, el prelado qué practica
estudiado todo lo que se enseñaba entonces; y si se de esta ceremonia traza con su dedo en la ceniza con
dicó con particularidad á las ciencias eclesiásticas, que se cubre el pavimento de la nueva iglesia, .
fue porque tuvo necesidad de ellas para predicar el Esta ceremonia nos dá á entender que la Iglesia es
Evangelio. Estableció escuelas para estas mismas la verdadera madre de los fieles, que ella les dá los
Ciencias, y contribuyó, en cuanto pudo, á sacar á los elementos de la verdadera ciencia; de la ciencia de
pueblos de Alemania de la ignorancia grosera en que salvacion, y que reune á todos los pueblos.
estaban sumidos. Qué mas podia hacer y esto no era
hacer un servicio real á las letras? Alianza. En las santas Escrituras, se usa mu—
No sabemos lo que quiere decir Mosheim, cuando chas veces el nombre testamentum, en griego DIAT
niega á S. Bonifacio el conocimiento de las cosas que zeig, para espresar el valor de la palabra hebrea bé
tieneº porobjeto la verdadera naturaleza, y el verda rith, que significa alianza. De aqui proviene las de
derogenio de la religion cristiana. Si por esto entien
de ¿ este misionero no conocia el cristianismo, tal co nominaciones de antiguo y nuevo Testamento, para
marcar la antigua y nueva alianza. La primera alian
mo les plugo forjarle á los protestantes, desde luego za de Dios con los hombres fue la que hizo con Adan
convenimos con él; segun ellos basta leer y estudiar en el momento de su creacion, cuando le prohibió el
la Sagrada Escritura; ahora bien S. Bonifacio la ha uso de la fruta del arbol de la ciencia del bien y del
bia estudiado y leido constantemente, y hasta la en mal, Gén. c. 2, y . 16. Esta prohibicion es una espe
señó á los demas en su monasterio; pero tuvo la des cie de contrato entre Dios y el hombre, asi es llama
gracia de no ver en ella, lo mismo que nosotros, lo da en el Eccle., c. 14, y. 12. . ..
que los protestantes han pretendido ver ochocientos La segunda alianza es la que Dios hizo con el hom
años despues. bre despues de su pecado, prometiéndole un redentor,
Por lo que respecta á la pretendida heregía de los En consideracion á esta promesa, Dios no condenó á
AN riponas, véase esta palabra. Mosheim y los demas Adan á la pena eterna que merecia, sino solo á una
protestantes no han hablado con mas justicia de las temporal, al trabajo, á los padecimientos y á la muer
misiones del siglo IX, que por orden de Carlo Mag te. «Si nuestra vida, dice S. Agustin, es trabajosa y
no se predicaron á los sajones. V. Misiones. »está sujeta á la muerte, es un efecto de la cólera de
º Sº No hay incidente histórico de que los pro »Dios y un castigo del primer pecado... Mas Dios no
testantes y filósofos no echen mano para convertirlo »nos ha tratado como merecian nuestros pecados, tu
á su manera contra la Iglesia romana. Esta suerte »vo piedad de nosotros, como un padre tiene compa
ha tenido la historia entre S. Bonifacio y Virgilio, re »sion de sus hijos; lo que nosotros sufrimos es un re
lativa á la cuestion que indica el abate Bergier. En »medio y no una venganza, es una correccion y no una
efecto S. Bonifacio ¿ á Virgilio ante et Papa »condenacion, etc. Envió á su Hijo porque tuvo
Zacarías, diciendo que entre otros errores enseña »piedad de nosotros.» Enarr. in Ps. 102 n. 17 y sig.
ba: «que habia otro mundo, otros hombres bajo la Enchir. ad. Laur. c. 27, n. 8. V. ADAN. -

ºtierra, otro sol y otra luna». El Papa respondió que S. Pablo ha preconizado muchas veces las ventajas
si persistia en enseñar semejantes errores, era nece de esta alianza, por cuyo medio el segundo Adan,
sario deponerle, y le mandó irá Roma á fin de que que es Jesucristo, ha reparado del modo mas comple
allí se examinase su doctrina. Algunos autores mo to el perjuicio que el primer hombre habia ocasiona
dernos, entre otros D'Alembert, infirieron de aqui do á ioda su posteridad. «De la misma manera que
ridículamente, que el Papa Zacarías condenó la opi »todos mueren en Adan, asi serán todos vivificados
nion de los que admitian antípodas; pero en la impu »en Jesucristo». 1., Cor. c. 15, y, 22., «Asi como por
tacion de S. Bonifacio no se trataba de semejante »la desobediencia de uno solo, la multitud de los hom
cosa, sino de los hombres de otro mundo, que no des »bres se hicieron pecadores, asi por la obediencia de
cendian de Adan, y que no habian sido rescatados por »uno solo, la multitud de los hombres serán justosº.
Jesucristo; y claro es que esto podia ser condenado. Rom. c. 5, y, 12 y 19. «Por su muerte, Jesucristo ha
Como los protestantes y filósofos tienen la indispu— » destruido al que tenia el imperio de la muerte, es
table habilidad de tomar al vuelo ciertas especies » decir, al demonio.» Hebr. c. 2. y.1 V. RepENcios.
sueltas para coordinarlas en el vasto taller de su cons Otra tercera alianza fue la que el Señor hizo con
piracion permanente contra la Iglesia católica, pre Noé, cuando le dijo que construyera un arca ó una
ciso es acostumbrarnos á mirar con prevencion y "sa nave, para salvar en ella los animales de la tierra, y
na crítica sus aserciones aventuradas y peligrosas. ara que tuviera eon él un cierto número de hom
¿ á fin de que por su medio se pudiera volverá
Alfa y omega. Alpha y OMEGA, primera y úl repoblarla tierra despues del diluvio. Gén. c. 6, y. 18.
tima letras del alfabeto griego. Jesucristo dice en el Esta alianza fue renovada ciento veinte y un años
Apocalipsis, «Yo soy alpha y omega, el principio despues, cuando retiradas las aguas del diluvio, y
y el fin». c. 1, y.8; c. 21, y. 6; c. 22, y. 13. Con efec saliendo Noe del arca con su muger y sus hijos. Dios
to el Verbo divino es el que ha criado todas las co— le dijo «Voy ha hacer una alianza cóntigo y con tus
sas; es tambien su último fin, pues solo en él y por él »hijos despues de ti, y con todos los animales que han
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º salido del arca: de manera que yo no haré perecer fetas, el Mesias debe ser tan legislador como Moisés.
»mas toda la carne por medio de las aguas del diluvio: Deut. c. 18, y. 15; Isai. c., 2, y 4; Munimen fidei
» y el arco iris que yo haré aparecer en las nubes será 1.° part. c. 20. Esta funcion seria superflua, si no
»la señal de la alianza 1 que hago hoy contigo». debieran establecerse nuevas leyes, 3° Dios dese-º
Gén. c. 9.}. 8, 9, 10 y 11. -
chó los antiguos sacrificios y prometió un nuevo sa—.
Todas estas alianzas fueron generales entre Adan cerdocio. Ps. 49, y 7; Isai. c. 1, y 16 y sig. c. 66, y
y Noé y toda su posteridad; pero la que Dios hizo des 2; Jerem. c. 7, y.21; Ezech. c. 20, y 5 y sig; Mich.
pues con Abrahan fue mas limitadá, no comprendia c. 6, y. 6; Malaeh. c. 1, y . 10. Es tambien uno de los
mas que á este patriarca y la raza que debia nacer argumentos de S. Pablo, Hebr, c. 7, y. 12; c. 8, y . 8.
de él por parte de Isaac. Los demas descendientes ...º La antigua alianza establecia un muro de sepa
de Abraham por parte de Ismael y de los hijos de racion entre los judios y las demas naciones; la ley
Celhura no debian tener parte en ella. La señaló se de Moisés no era practicable mas que en la Judea;
llo de esta alianza fue la circuncision, á la cual tenian por el contrario, en la época del Mesias debian reu—
que sujelarse todos los varones de la familia de Abra nirse todas las naciones y formar el pueblo del Señor;
ham á los ocho dias de su nacimiento. Los efectos y los judios convienen en esto mismo; luego era nece
consecuencias de este pacto están muy palpables en saria una ley nueva que fuera practicable en todas
toda la historia del antiguo Testamento; la venida del las partes del mundo. 5 º Dios hizo impracticable
Mesias fue su fin y consumacion. La alianza de Dios la ley de Moisés aun para los mismos judios, por su
con Adan forma lo que llamamos la ley natural: la dispersion, por la destruccion del tempo, por la con
alianza con Abrahan, esplicada en la ley de Moises, fusion de las genealogías y por la incompatibilidad de
constituye la de rigor; y la alianza de Dios con todos sus leyes con el derecho público de todas las nacio—
los hombres, por la mediacion de Jesucristo, es la ley nes: luego Dios estableció una nueva ley por medio
de gracia; Génes. c. 12, y 1, 2, y c. 17. y 10, 11, y12. del Mesias, y subsiste hace mas de mil y ochocientos
Generalmente nunca hablamos mas que del antiguo años. Véase Philippi á Limborch amica collat, cum
y nuevo Testamento, de la alianza del Señor con la erudito Judeo etc. -

raza, de Abraham, y de la que hizo con todos los

hombres por medio de Jesucristo, porque estas dos
alianzas contienen eminentemente todas las demás
que no son mas que sus consecuencias, emanaciones
y esplicaciones: por egemplo, cuando Dios renovó
sus promesas á Isaac y Jacob é hizo una alianza en
elmonte Sinai con los Israelitas y les dió su ley; cuan estos dos dogmas esenciales han sido revelados á los
do Moises, poco tiempo antes de su muerte, renovó la
alianza que el Señor habia hecho con su pueblo, y pu
so ante sus ojos todos los prodigios que habia obrado
á su favor; cuando Josué, conociendo que se acerca
su fin, juró con los ancianos del pueblo una fide—
idad inviolable al Dios de sus padres: todo esto no
es mas que una continuacion de la primera alianza
hecha con Abraham. Josias, Esdras y Nehemias re
novaron del mismo modo en diferentes tiempos sus
juramentos y alianza con el Señor; pero no fue mas
que un nuevo propósito de fervor, y una nueva pro—
mesa de fidelidad en la observancia de las leyes da—
das á sus padres, Earod. c. 11, y.2, c. 6, y .7; c. 19,
y,5; Deut. c. 29; Jos. c. 23, y 25; IV Reg. c2 y 18,
Paralip. c. 2 y 22.
La mayor, la mas solemne, la mas escelente y per
fecta de todas las alianzas de Dios con los hombres
es la que ha hecho con nosotros por la mediacion de
Jesucristo; alianza eterna que debe subsistir hasta el
fin de los siglos, garantizada por el IIjo de Dios, cimen
Alma, sustancia espiritual, que piensa y es el
principio de la vida en el hombre. A los filósofos cor—
responde el esponer las pruebas de la espiritualidad
é inmortalidad del alma humana que puede suminis
trarnos la luz naturat; á los teólogos el hacer ver que
hombres desde el principio del mundo; que Dios no
aguardó á las teorías de la filosofía para enseñarlos
estas dos verdades importantes, y que los filósofos
mismos nunca han podido demostrarlas completa
mente, porque carecieron de las luces de la revela
cion. Por nuestra parte, añadiremos algunas reflec
siones sobre el origen del alma.
l.
De la espiritualidad del alma.
La primera verdad que nos enseña la historia santa
es que Dios es creador, que lo hizo todo por su palabra
ó por un simple acto de su voluntad; luego es un puro
espíritu. En la palabra CREAcioN haremos ver que esta
consecuencia es incontestable. Esta misma históría nos
enseña tambien que Dios ha hecho al hombre á su
imagen y semejanza. Gén. c. 1, y 26 y 27, c. 9, y. 6.
Luego el hombre no es solo un cuerpo, es inteligente,
activo y libre en su voluntad como Dios. -

tada afirmada por su sangre, qué tiene por objeto Allí se dice que despues de haber formado un cuer.
y fin la vida eterna, cuyo sacerdocio, sacrificio y le po de tierra, Dios sopló sobre la cara del hombre; y
yes son infinitamente mas perfectas que las del anti ¿ desde aquel momento tuvo vida, fue animado y
guo Testamento. Véase á S. Pablo en sus Epístolas á otado del movimiento y de la palabra. Efectivamen
los Gálatas y á los Hebreos. -
te, sobre el rostro ó la fisonomía del hombre es en don
En vano sostienen los judíos que Dios no ha po— de brillan la vida, la inteligencia, la actividad, los
dido establecer una nueva alianza, despues de ha deseos y los sentimientos de su alma. Nada de seme
berles mandado observar la de Moisés perpétuamen jante se encuentra en los animales, El alma y el enº
e. Se les prueba lo contrario; 1:º porque Dios lo ha tendimiento no son sensibles por sí mismos sino por
declarado así, Jerem. c. 31, y, 31 y sig. y este es el sus efectos; no pueden ser designados mas, que por
argumento que les hace S. Pablo, Hebr. c. 8, y. 8. estos; el mas sensible de sus efectos es el aliento ó la
2." Ellos mismos convienen en que, segun los pro respiracion, todo lo que respira es reputado como vi
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viente. Es pues muy natural que se esprese por el á los israelilas para espiar sus almas, cuando se ofre
soplo el principio mismo de la vida. Está escrito que cia sobre el aliar. En este sentido pues es como dice
el soplo del Todopoderoso da la inteligencia, Job c. Levit. c. 17, y . 11. «La sangre es para la espiacion de
32, y.8. Nuestros autores sagrados jamas atribuye alma», y Deut. c. 12, y. 23. «Su sangre es para el al
ron la inteligencia á la materia. Los filósofos que han ma.» Nada de esto significa que la sangre sea lo
dicho que el soplo designa aqui alguna cosa material, mismo que el alma en los animales.
reflexionaron muy poco sobre la energía del len Como el alma significa en general el principio de
guage. - la vida, los hebreos han podido decir, como nosotros,
Dios dice: «Hagamos al hombre á nuestra imagen y el alma de los brutos, porque efectivamente tienen un
»semejanza, para que presida á los animales, á todo principio de vida. Cuál es este? No lo sabemos mejor
»lo que vive sobre la tierra, y á toda la tierra mis que ellos. Pero jamás creyeron, del mismo medo que
»ma.» Gén. c. 1, y . 26. Y con efecto Dios le dió este nosotros, que este principio fuese el mismo en el hom
imperio y. 28; el hombre es pues de una naturaleza bre y en los brutos. Se sirven de la voz alma para
muy superior á la de los animales, pues que ha sido designar al hombre, y no á los animales cuando di
criado para ser su Señor. cen: toda alma que no reciba la circuncision, toda al
Efectivamente, Dios no habla á los seres materia ma que peque morirá; toda alma que no se aflija etc.
les, ni dirige la palabra á los animales; pero habla Atribuyen á el alma y no al cuerpo las funciones es
al hombre, conversa con él, le concede derechos, y pirituales. Cuando David dice: mi alma se regocija
le impone deberes; obra respecto de él como con un en el Señor, mi alma está aflijida, alma mia bendice al
ser inteligente, libre, dueño de sus acciones y digno Señor, etc, todo esto no puede entenderse del aliento,
de recompensa y de castigo: se trata asi á un autó— de la respiracion, del principio de la vida material.
unata ó á un animal? Las teorías metafísicas sobre la No tardaremos en probar que los isrealilas creye
naturaleza del entendimiento y de la materia y las di ron constantemente en la inmortalidad del alma hu
sertaciones gramaticales sobre la significacion de los mana; de donde deduciremos que nunca la confun
términos, son bien frias en comparacion de las lec— dieron con el aliento ó la respiracion.
ciones que nos da la historia santa. Nadie nos obligará, segun Creemos, á demostrar
No es por lo tanto de admirar, que no se haya en— que Jesucristo ha confirmado por sus lecciones divi
contrado aun sobre la tierra ningun pueblo tan estú— nas la creencia primitiva de la espiritualidad del al
pido para confundir el espíritu con la materia, y el ma, y que disipó completamente las dudas que una
hombre con los animales; la mayor parte han que filosofia contenciosa habia esparcido sobre esta im
rido mas bien conceder un alma inteligente y espiri rtante cuestion. «Dios es espíritu, dice, y los que
tual á los animales, que negársela al hombre.
-
¿, un culto deben adorarle en espíritu y en
¿Será preciso recorrer toda la série de la historía verdad.» Joan. c. , y 2. Pero al establecer de una
y de los libros santos para demostrar que siempre manera incontestable la inmortalidad del alma es co
subsistió la misma creencia entre los hebreos? En va mo principalmente nuestro divino Maestro demostró
no buscariamos en ellas el menor vestigio de mate su espiritualidad: ya lo veremos un poco mas abajo.
rialismo, ó espresiones capaces de probar que los ju Los incrédulos que no saben argüir mas que sobre
díos colocaron al hombre en el rango de los anima palabras, han objetado muchas veces, que en el
les. La reprension mas fuerte, que los autores sagra Evangelio el alma no significa otra cosa mas que la
dos hacen á los hombres corrompidos y entregados á vida. Esto no es de admirar, pues que el alma es el
las pasiones brutales, es el decirlos que han olvidado principio de la vida; pero cuando Jesucristo dice:
su propia naturaleza, que se han degradado hasta el «El que pierda su alma por mí, la encontrará, el que
punto de ponerse al nivel de los animales, y que se »aborrezca su alma en este mundo la guarda para
han vuelto semejantes á los brutos. Ps. 8, y 15 y 21; »una vida eterna.» Matth. c. 10, y, 39; Joan c. 12,
Isai, c. 1, y. 3, etc. y. 25; no se trata mas que de la vida del cuerpo?
Se ha tratado de poner en ridículo á Moises, porque En la imposibilidad de hacer de Jesucristo un ma
al prohibir á los israelitas el comer la sangre de los terialista, nuestros sabios disertadores han querido
animales, dice que el alma de toda carne está en la r lo menos imputar esta mancha á los Padres de
sangre, y que esta es el alma de todos los animales. "¿ Han sostenido que asi como ninguno de
Levit. c. 17, y, 11 y 1; Deut. c. 12, y .23. De esto han los antiguos filósofos, tuvo idea de la perfecta espiri
deducido que los autores sagrados, al hablar del alma tualidad, los Padres de la Iglesia tampoco la conci
eu general, no entendieron mas que el aliento ó la bieron mejor: que solo entendian por el espíritu una
respiracion. materia sutil; que segun su opinion, Dios, los ánge
Aun cuando Moises hubiera querido dará enten les y las almas humanas son sustancialmente cuer
der, que el principio de la vida de los animales está pos, pero ligeros, ígneos ó aéreos. . -

en su sangre, no vemos porqué razon demostrativa Seguramente no tenemos el menor interés en jus
nuestros mas hábiles físicos podrian demostrar lo con - tificar á los antiguos filósofos, pero nunca nos resol
trario, y de esto tampoco se seguiria que Moises pen veremos á creer que hombres que combatieron con
sólo mismo respectó del alma del hombre. Mas este todas sus fuerzas contra el materialismo de los epicú
legislador no trataba de hacer una disertacion filosó reos, hayan caido en el mismo error, Ciceron en sus
fica sobre el alma de las bestias; solo daba á los he Tusculanas probó la espiritualidad del alma, tan só—
breos una razon sensible de la ley que les imponia. Les lidamente como Descartes; y hace profesion de repe
prohibe comer la sangre de los animales, porque esta tir las lecciones de Platon, de Sócrates y de Aristóte—
sangre, sin la cual no pueden vivir, fué dada por Dios les. Nuestros literatos modernos se han mofado de
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este último; porque dice que el alma es una entele calumniar á los Padres, hay muchos que son forja
quia ; no saben que entre los griegos ENTELEJEvA sig dos, otros que están sacados de obras que no cor-,
nifica lo mismo que intelligentia entre los latinos. Hé responden áá los autoresá quienes se atribuyen, y otros
aqui unos disertadores muy capaces de juzgar de la en los cuales se ha forzado el sentido de las espresio
doctrina de los antiguos filésofos. nes; mas nuestros adversarios no son escrupulosos
Todavia creemos menos que los Padres de la Igle para elegir las armas de que echan mano.
sia hayan preferido las lecciones del pórtico ó de la Dicen que los antiguos se encontraban muy emba
academia á las de la sagrada Escritura, y que al ad razados para esplicar el orígen del alma, y principal
mitir un Dios creador, le hayan supuesto un Dios cor mente Tertuliano, l. De anima c. 19, y San Agus
poral; estos dos dogmas son incompatibles. La ma tin l. De origine animae. Pero acaso tenemos necesi
yor parte ha insistido sobre lo que se dice en cl Gédad de esplicarle mejor que lo hace la Sagrada Es
nesis, que Dios ha hecho al hombre á su imágen; y critura? S. Agustin no ha tratado esta cuestion sino
jamas pensaron que un cuerpo, por sutil que pudiera porque hubiera querido concebir cómo el pecado
ser, se asemejara á un puro espíritu. Por último to de Adan fué transmitido á sus descendientes. Esto
dos han atribuido á el alma humana la inteligencia, no es indispensable; hasta creer el dogma del pecado
la libertad y la inmortalidad; propiedades que no original tal como ha sido revelado. Tertuliano, en
pueden pertenecerá un cuerpo. aquel mismo libro, sostiene con todas sus fuerzas la
Es verdad que los Padres de la Iglesia, obligados á simplicidad, la indivisibilidad y la indisolubilidad
sujetarse al lenguage ordinario, se han encontrado del alma, c. 1. Sin embargo se han obstinado en de
con las mismas dificultades que los filósofos; han te cir que crevó en el alma corporal.
nido que espresar la naturaleza, las propiedades y "M. Frayssinous establece que nada ¿ mas lu
las operaciones del alma por términos sacados de las minoso que las pruebas de la espiritualidad del alma
cosas corporales, porque ninguna lengua del univer sacadas:
so podia suministrarles otros. Asi los unos han toma 1." De la facultad que tiene el hombre de sentir.
do la voz cuerpo en un sentido sinónimo al de sustan 2.º De la facultad que tiene de pensar.
empleaban
cia, porque esta no lanosotros; los latinos para sig
otros han llamado á la
3.° De la facultad que tiene de juzgar.
nificar lo mismo Consideremos primero en el alma la capacidad que
manera de estar de los espíritus una forma, y á su ac tiene para esperimentar sensaciones. Todas las im
cion un movimiento; y otros han designado la pre presiones recibidas por los diversos órganos son trans
sencia del alma en todas las partes del cuerpo por el mitidas á un principio único, el cual las percibe, las
término de difusion, igualdad, cantidad; metáforas compara y las aprecia. No solo conocemos nuestras
sobre las cuales no se pueden apoyar los argumentos sensaciones, y no solo reflexionamos sobre lo que
sin caer en ridículo. En el siglo tercero de la Iglesia, ellas nos presentan, sino que ademas muchas veces
Polin discípulo de Platon, en su cuarta enneada; en comparamos las unas con las otras. Yo esperimento á
el cuarto, S. Agustin en su libro de quantitate anima; la vez diversas sensaciones. A veces me las procura
en el quinto, Claudiano Mamerto en su tratado de el mismo objeto: veo, gusto y siento la comida; oigo
statu anima, demostraron la inmaterialidad del alma y toco un instrumento. Otras veces son diferentes
con las mismas pruebas que Descartes. Es pues ridí objetos los que hieren mis diversos sentidos, oigo
culo el atribuirles el materialismo por via de conse una música al mismo tiempo que veo hombres, espe
cuencia, ó apoyándose en algunas espresiones que no rimento el calor del fuego , percibo un olor, y como
son eneramente esactas, al paso que hacen una pro una fruta. Distingo perfectamente estas sensaciones
fesion formal de la doctrina contraria. diversas; las comparo, juzgo cuál es la que me afec
El colmo de la temeridad ha sido el afirmar, como ta mas vivamente y con mas placer, prefiero la una
acontece en nuestra época, que San Agustin fue el á la otra, y la elijo. Ahora bien, este yo que compara
primero, que despues de los mayores esfuerzos, vino las diversas sensaciones, es indudablemente un ser
á coneebir la espiritualidad y la esencia del alma; pe simple; porque si fuera compuesto recibiria por sus
ro que no obstante siempre raciocinó como perfecto diversas partes las diferentes impresiones que cada
materialista sobre las sustancias espirituales. No solo sentido le transmitiera: los nervios del ojo le llevarian
en la obra que acabamos de citar, sino en el libro á una parte las impresiones de la vista, los del oido
10, De Trinitate, c. 10, este Santo Padre da una de harian pasará otra parte las recibidas en la oreja, y
mostracion de la espiritualidad del alma, á la que nin asi de los demas. Pero, si las diversas partes del ór
gun materialista ha contestado. gano físico del cerebro son las que, por ejemplo, re
Se atribuia en otro tiempo á San Gregorio Tauma ciben cada una por su parte la sensacion, cómo se las
lurgo una disputa en la cual el autor prueba contra asociará y se hará su comparacion? La comparacion
Taciano que el alma humana es una sustancia in exige un comparador; el juicio supone un juez úni
material, simple y no compuesta, y por consiguien co. Estas operaciones no pueden verificarse sin que
le inmortal. Esta obra es sin duda alguna de un es las diferentes sensaciones vayan á parar todas á un
critor mas moderno, pero que rasiocinia de un modo ser simple. Bayle, que no debe ser sospechoso para
sólido. Gerardo Vossius observa que la misma doctri los incrédulos, haciendo este raciocinio (Noticia de
na es formalmente profesada por San Máximo en una la república de las letras, agosto 1684, art.6pág. 119),
disertacion sobre el alma, por San Atanasio, San Juan se espresa de esta manera: Se puede decir, sin hipér
Crisóstomo y San Gregorio Nacianceno. Cuidaremos bole, que es una demostracion tan segura como las de
de justificar á los demas en un artículo especial. la Geometria.
Entre los pasages alegados por los incrédulos para
 ALM 67 ALM
Vamos ahora á considerar en el alma la capacidad »pensamiento y de la matería. Hé aqui pues como
de enjendrar ideas. Lo que no tiene estension y no es »analizando vuestra esplicacion mecánica del pensa—
divisible, como el pensamiento, no puede identifi » miento, no se encuentran en ella mas que palabras
carse con lo que es estenso, figurado y divisible co »insignificantes ó absurdos palpables.»
mo la materia, luego lo que piensa no es materia: es Ultimamente vamos á considerar en el alma la ca
muy curioso el ver lo que los ideólogos modernos han pacidad para formar juicios. Supongo que poseais
inventado para esplicar mecánicamente el pensamien una multitud de conocimientos diversos; esa masa de
to. Escuchad á esos doctores del materialismo: Caba sensaciones que habeis esperimentado, de ideas que
nis, por ejemplo, os dirá (telaciones de lo físico y de habeis concebido y de reflexiones que habeis hecho,
lo moral en el hombre, t. 1. 152) «que el cerebro el único depositario de ellas es un solo principio.
»es el órgano especial destinado para producir el pen »No existe en vosotros, dice M. Frayssinous, un prin
»samiento, como el estómago y los intestinos lo es »cipio para las sensaciones, otro para las ideas y otro
»tan para hacer la digestion. Los alimentos caen al » para los juicios; no existe en vosotros muchos yo,
vestómago con sus cualidades propias, y salen de él »no hay mas que uno: el mismo yo es el que ve este
»con otras nuevas. El estómago digiere: asi las im » mundo, el que conoce, su bondad, y juzga que un
»presiones llegan al cerebro por el intermedio de los »ser inteligente ha debido ser su autor. Este último
» nervios; esta víscera entra en accion, obra sobre »acto de vuestro entendimiento, por medio del cual
»ellas, y bien pronto las vuelve á enviar metamorfo » se eleva hasta Dios á sus perfecciones infinitas, y á
»seadas en ideas: de lo cual podemos concluir con »los deberes que de todo esto se deducen, supone mu
»la misma certeza, que el cerebro digiere en alguna »chas sensaciones, muchas ideas preliminares y jui
» manera las impresiones, y hace orgánicamente la »cios particulares; en este sentido, vuestro juicio in—
» secrecion del pensamiento.» «En este lenguaje hay »terior será compuesto; mas el acto en sí mismo, por
»tantas equivocaciones como palabras; responde M; » cuyo medio juzga y pronuncia el entendimiento, es
»Frayssinous, y en esto se conoce toda la debilidad »uno, esta operacion intelectual es indivisible; y he
» de la mentira, que acosada por todas partes se rc »aqui cómo todas las funciones, aun las mas íntimas
»fugia en las anfibologias y en las mas vagas oscuri » de nuestra inteligencia, nos conducen á su inmate
»dades. Si se nos dijera, que despues de la union del »rialidad.»
»alma con el cuerpo, aquella tiene necesidad del ór M. Frayssinous prueba tambien que nada hay mas
»gano del cerebro para hacer sus operaciones, ya se vano que los argumentos que combaten la espiritua—
»podria entender este lenguaje. Pero hay cosa mas lidad del alma, y que los materialistas pretenden
» estraña que hacer del cerebro una máquina de pen SaCar:
»samientos? Efectivamente, vosotros me decis que el 1.º De la autoridad.
»cerebro dijiere las impresiones que le son transmiti 2." De la influencia del cuerpo sobre el alma.
»das; pero las impresiones hechas sobre los órganos De la semejanza entre el hombre y los ani
» no pueden ser mas que limilaciones, vibraciones y ImaleS.

» una separacion de las partes materiales, en una pa En primer lugar, apoyándose en la autoridad, afir
»labra, movimientos. Asi es, que decir que el cerebro man que los filósofos antiguos, y aun los Padres de la
»digiere impresiones, es lo mismo que decir, que di Iglesia cristiana, no conocian el dogma de la espiri
»giere movimientos; hubo jamas manera mas bár tualidad del alma. Esta objecion será refutada en el
¿ de pensar y de ¿ Añadís, que acon artículo EspíRITU.
» tece al cerebro, con relacion á las impresiones, lo En segundo lugar, de las relaciones constantes de
» mismo que al estómago con las sustancias nutriti lo moral y de lo físico en el hombre, los materialistas
»vas; pero sed consecuentes y llevad la compara concluyen que son una misma y única cosa, diversa
»cion hasta el fin. Qué hace la accion del estómago? mente modificada; como si lo que prueba la corres
»Transforma los alimentos que recibe; pero las cua pondencia entre el alma y el cuerpo probara su iden
»lidades que les imprime no son incompatibles con un tidad No es por armuiría y dependencia de las dos
» ser material, y no impiden que permanezcan en la sustancias, como debe juzgarse de si es su naturale
» naturaleza de las sustancias materiales. Luego se za la misma, sino por sus ideas, sus propiedades y
»ria preciso decir la accion del cerebro, al cam efectos: regla fija y única infalible para juzgar bien.
»biar y modificar los movimientos que llegan hasta En tercer lugar, conceden á los ¿ el senti
Ȏl, los deja siempre en su estado de movimiento; miento y el pensamiento; sin embargo les niegan una
»luego de aqui nunca resultaria mas que movimien alma espiritual, y de esto deducen que puede suce
»to; y ya está bien demostrado que el movimiento no der lo mismo respecto del alma humana. Nosotros
» es el pensamiento. Proseguis diciendo, que el cere— respondemos á los materialistas: que en lugar de
»bro vuelve á enviar las impresiones metamorfosea una hipótesis, les presentaremos dos. ¿Quereis, como
»das en ideas. Mas yo pregunto ahora, en dónde son Descartes, que los animales sean puras máquinas, y
» recibidas esas ideas? es indispensahle que lo sean que no tengan ni pensamientos ni sentimientos? En
»en alguna parte. De la misma manera que el movi este caso no es de admirar que estén sin alma, y en
»miento no existe sino en el cuerpo movible, el pen tonces no pueden compararse con nosotros que cier
»samiento no puede estar sino en un individuo que tamente sentimos y pensamos. Por el contrario, que—
» piensa, y siempre volvemos á la misma cuestion. De reis concederles el sentimiento y el pensamiento? En
»qué naturaleza es esa sustancia que tiene todas esas este caso, ya se os puede dasafiar resueltamente á que
»ideas? Si la haceis material, os opongo mis pruebas, probeis ¿ no tiene alma, no digo que sea un alma
»que siempre están en pie, de la incompatibilidad del como la del hombre, tan pefecta en sus facultades,
 ALM 68 AM
sino un alma cuya ecsitencia sea limitada por la del » poseernos de ella con pruebas claras y decisivas.
animal, y cuyas funciones sirvan para la conserva No solo la espiritualidad del alma nos d una prue
cion y necesidades físicas del animal. ¿No es muy es ha de su ecsilencia despues de la muerte corporal,
traño por cierto que el hombre, tan soberbio para sino que ademas el presentimiento de una vida futu—
abrogarse lo que viene del Criador, esté en el dia ha ra, sentimiento conun á todos los hombres, es un
ciendo los mayores esfuerzos, tanto de cieneia como testimonio de esta permanencia. El amor á la gloria
de entendimiento para persuadirse que las bestias de que están poseidos los hombres célebres, está
valen mucho, y que entre estas y él, a diferencia es arraigado en la esperanza secreta de una vida que
muy ligera? Pero á despecho de los sofismas, el reina-.
debe empezar con la muerte.
do del hombre no perecerá. «Su preeminencia res Sensible por naturaleza el hombre, desea la feli
» plandece por todas partes, dice M. Frayssinous; se cidad, y tiende á ella como hácia su último término.
» manifiesta en la magestad de su aspecto, en la dig Si no la encuentra en la tierra, no es indispensable
»nidad de su frente, en la sublimidad de sus miradas que la busque en una vida mejor? Sus desos son pues
» y en la posicion de su brazo, que tiene levantado y una nueva consideracion á favor de la inmortalidad
» estendido sobre su imperio; pero principalmente en de su alma. -

» donde brilla la grandeza de su rango es en ese pen La creencia universal del género humano da otra
» samiento que esparce á su alrededor por medio de no menos poderosa.
»la palabra; y le conduce á todos los lugares por me Por confesion misma de Bolingbroke, «la doc
» dio de la Escritura; en ese entendimiento de quien » trina de la inmortalidad del alma y de un estado fu—
»los libros santos dan una idea tan magnífica dicien »turo de recompensa y castigo, parece que se pierde
»do que es hecho á la imágen de Dios. Si, por su im » en las tinieblas de la antigüedad: precede á todo lo
» perío sobre esta porcion de materia, que le está uni »que tenemos de cierto. Desde que empezamos á de
» da y que gobierna, el alma diseña algo, la accion » sembrollar el caos de la historia antigua encontra—
»poderosa del motor del universo; la rapidez de sus »mos esta creencia establecida de la manera mas só—
»pensamientos, la memoria de lo pasado, la concien »lida en el entendimiento de las primeras naciones
»cia de lo ¿? el presentimiento del porve »que conocemos.» -

»nir, le aprocsiman á la inteligencia infinita, que de «Muchos filósofos, dice Leland (Nueva demostra
» una ojeada abraza todos los tiempos y lugares: la »cion evangélica t.), han enseñado la inmotalidad
»impetuosidad de sus deseos insaciables, la estension » del alma y un estado futuro de recompensas y pe
» de sus esperanzas sin límites, la advierten que de »nas; mas no han enseñado este dogma como una
»be poseer por gracia la elernidad que Dios posee »opinion que hubiesen inventado, una produccion de
«por naturaleza”. »su razon, un descubrimiento de su genio filosófico,
II. » sino como una antigua tradicion que habian adop
De la inmortalidad del alma. »tado y que apoyaban con los mejores argumenios
» que les suministraba la filosofía.»
M. Frayssinous saca sus pruebas del conocimiento Platon (De legibus l. 10.) nos enseña cuál era esta
rofundo y combinado del hombre y de Dios, y desde tradicion. «El que reina sobre nosotros, habiendo vis
uego, del conocimiento del hombre, fundado en la »to que todas las acciones humanas son por el alma,
consideracion: »bien sea la virtud, bien el vicio, nos ha preparado
1.° De la naturaleza de su alma. » diferentes mansiones segun la naturaleza de nues
2.º De sus sentimientos. »tras acciones, dejando á nuestra voluntad la elec—
3." De sus deseos. »cion entre estas diversas moradas.... Asi las almas
4." De sus creencias. » llevan en sí mismas la causa del cambio que deben
Por lo mismo que nuestra alma es un ser simple, »esperimentar, segun el orden y la ley del destino.
la muerte del cuerpo, ser compuesto, no lleva consigo » Las que no han cometido mas que faltas ligeras des
la del alma, y todo nos induce á creer, que no ha ¿ menos que las almas mas culpables; andan
sido aniquilada por una voluntad positiva del Criador, »errantes sobre la superficie de la tierra. Las que han
» El cuerpo es sin duda alguna menos perfecto que el » cometido mas crímines, y crímenes mayores, son
» alma: ahora bien, despues que la muerte rompe to » precipitadas al abismo que se llama infierno ú otro
» todos los lazos que les unian, el cuerpo ecsiste toda » nombre semejante, lugar temido por los vivos y los
» via en todas sus partes, cambia de figura, sufre mu » muertos, y cuyo pensamiento inquieta al hombre.
»chas transformaciones; pero últimamente no es ani » aun durante su sueño. Pero el alma que, por los con
» quilado: y quereis que el alma, la porcion mas no » línuos esfuerzos de su voluntad, adelanta en la vir
»ble de nosotros mismos, tan superior al cuerpo por »tud, y se corrige de los vicios, es transportada á una
» sus facullades, vuelva á la nada? Seguramente, yo »morada, tantomas feliz y santa, cuanto mas se aproc
» tengo el derecho de suponer que el alma del hombre » sima á la perfeccion divina; lo contrario acontece á
» no es de una condicion peor que un átomo de mate »el alma, que en lugar de corregirse, se pervierte,
»ria, y si no hay un ejemplo en el universo desde la »Jóven, tal es el juicio de los dioses que habitan en el
» creacion, del aniquilamiento de un solo átomo, ¿no »cielo, de los dioses que tu te imaginas que no se
» me fundaré al creer que el alma está muy lejos de »ocupan de lí. Los buenos serán unidos á las almas
» que pueda volver á, la nada? Hé aqui dice Fenelon » de los buenos, y los malos á las almas de los malos.
» (Cartas sobre la religion, l. 2, c. 2, n. 6.), la preo »Cada uno se unirá á los que se le asemejen, para
» cupacion mas racional, la mas constante y la mas »obrar y padecer segun lo que sea. Que ni tú ni nin
» decisiva: á nuestros adversarios toca el venir á des »gun otro se linsogee de evitar este juicio de los dio
 ALM 69 ALMI
»ses. Cuando lú.penetres en las profundidades de la » de los que les han dado la paz y el descanso.»
» tierra, cuando tomando tu vuelo te eleves á las al «Concluyamos con Leland (Nueva demostracion
» turas de los cielos, te esperará el suplicio que hayas evangélica, c. 2), que no se puede sacar consecuen
» merecido, sea aqui abajo, sea en los infiernos, sea, cia mas legítima, respecto de la grande antigüedad
» en fin, en un lugar mas terrible todavia.» de esta doctrina, que ésta, á saber: que formaba
Sócrates profesaba «que hay dos caminos diferen parte de la religion primitiva comunicada por una re
»tes para las almas cuando salen del cuerpo. Aque velacion espresa de Dios á los primeros padres del gé
»llas que, arrastradas y cegadas por las pasiones, se nero humano, á fin de que la trasmitieran á su pos
» encuentran manchadas con vicios ocultos ó críme— teridad. Esta es la opinion de Grocio, que dice que la
»nes públicos, toman un camino separado que las tradicion de la inmortalidad del alma pasó desde
»conduce á larga distancia de la asamblea de los dio— nuestros primeros padres á las naciones mas civili
» ses; pero las que, ¿ caslas y puras, se zadas: ¿ antiquissima traditio á primis (unde
» han preservado del contagio del vicio y han teni enim alioqui?) parentibus ad populos moratiores pene
» do en un cuerpo mortal una vida enteramente di omnes manarit, c. 21. Con efecto, es muy difícil de
» vina vuelven á los dioses, de los que han proveni concebir que en aquellas primeras edades en que los
y do.» Tal es, añade Ciceron (Tusculan. l. f, c. 30) hombres groseros é ignorantes eran incapaces de ha
la doctrina de los antiguos y de los griegos. El mis cer raciocinios abstractos y sutiles, hubieran llegado
mo Ciceron, De amicit. n. 4, hace decir á Lelio: por sí mismos á formarsé nociones de la natura
«Yo no soy del parecer de esos innovadores que di leza de un ser inmaterial que debia sobrevivir á la
»cen en nuestros dias que todo concluye en la tum muerte del cuerpo, y continuar pasando despues de la
»ba; es de mucho mas peso para mí la autoridad de destruccion de los órganos corporales. ¿Cómo pudie
»ios antiguos, la de nuestros antepasados y persona ron entonces elevarse hasta las especulaciones subli
»jes mas ilustres que fueron la gloria y el ornato de mes y penosas de la naturaleza y cualidades del alma,
»la Grecia, y principalmente de aquel que fue de en las que despues encontraron tantos obstáculos los
»clarado el mas sabio de todos.» filósofos y los mayores genios, en la mejor edad de la
Séneca, cap. 117, hace observar, que cuando se ciencia? Todos los conocimientos de los hombres se
trata de la inmortalidad de nuestras almas, el asen limitaban en aquella época á lo que podian apren
timiento universal de los hombres no tiene poco im der por la observacion y la esperiencia, ó por la via
perio sobre nuestros entendimientos. de la instrucion. Veian morir á sus semejantes des
Sabemos por Cesar (De bello gallico, l. 6), que los pues de haber vivido un cierto número de años. Véa
Druidas fomentaban el valor de los guerreros, y les se pues á qué estaba reducida la esperiencia acerca
exhortaban á despreciar los peligros, con la esperanza del fin del hombre; no era la mas apropósito para
de la inmortalidad. De esta creencia, dice tambien dar una idea de la vida fulura, en la cual cada uno
Lucano (Pharsal. l. 1, V. 60), es de donde sacaban será castigado ó recompensado, segun haya vivido
el ardor impetuoso con que corrian á la muerte: se— bien ó mal en esta. No fué por lo tanto, ni por un ra
gun ellos, nada es mas cobarde que el conservar una ciocinio científico de que no eran capaces, ni por la
vida que no se pierde sin retorno. esperiencia ni observacion, por lo que los hombres
«Los cristianos, dice Celso (Orig. contra Celsum, llegaron al conocimiento de la inmortalidad del al
» l.8) tienen razon en creer que aquellos que viven ma y de un estado futuro. No queda, pues, mas que un
»santamente serán recompensados despues de su medio, el de la instruccion divina ó sea la revela
» muerte, y que los malos padecerán suplicios eter cion. A esta es á la que debe referirse el origen de
» nos. Por lo ¿ este sentimiento les es comun con esta tradicion universal. Muchos autores paganos de
» todo el mundo.» los ya citados la atribuyen un origen divino, y la Es
Esta creencia de los pueblos se manifiesta efecti critura Santa no nos permite dudar de esto mismo.»
vamente hasta en sus supersticiones y prácticas, aun El cuito religioso de los muertos, conocido en toda
las mas ridículas. Está indicado en las apoteosis, en la tierra, tanto en la antigüedad como en el dia ¿no
los sueños de la metempsícosis, por los campos Eli— está unido manifiestamente con la doctrina de la vida
seos y el Tártaro de la mitología, el juicio de Minos y futura? «En esto, dice Chateaubriand (Génio del cris
Radamante, la evocacion de las sombras y el temor nismo, l. 6, c. 3), es en lo que la naturaleza huma—
pueril á los muertos. na se presenta superior al resto de la creacion, y de
Antes que Cristóbal Colon abordase á América, se clara sus altos destinos. ¿Conoce acaso la bestia su
hallaba esparcida esta creencia de la inmortalidad ataud, y se inquiela por sus cenizas? ¿Qué impresion
por aquel pais, Robertson (Hist. de l'Amer l. ), es le causan los huesos de sus padres, ó mas bien ¿sabe
cribe; «La encontramos establecida de un estremo á cuál es su padre despues de haber pasado las necesi
» otro de la América, en ciertas regiones de una ma dades de la infancia? Entre todos los seres creados, el
»nera vaga y obscura; en otras mas desarrollada y hombre solo recoge las cenizas de su semejante, y las
»perfecta; pero en ninguna parte desconocida.» Pedro dirige un respelo religioso: para nuestros ojos, el
artir refiere en su sumario que un indio viejo dijo dominio de la muerte tiene alguna cosa de sagrado.
á Colon: «Nos has atemorizado con tu atrevimiento; ¿De dónde nos viene, pues, la idea poderosa que tene
»pero acuérdate que nuestras almas tienen dos cami mos de la muerte? Merecerian nuestros homenages
»nos despues de su salida del cuerpo. Uno es obscu algunos granos de polvo? No, sin duda: respetamos
»ro y tenebroso: este es el que toman las almas de las cenizas de nuestros antepasados, porque una vez
» los que han molestado á los demas hombres. El otro secreta nos dice que no se ha estinguido todo en ellos:
»62S ¿? brillante, y está destinado para las almas y esta voz es la que consagra el culto fúnebre en to
TOM10 I, 15
 ALM 70, ALM
dos los pueblos de la tierra. Todos están igualmente que aquellos mismos que no adoptaban la doctrina
¿ de que el sueño no es duradero, aun en de la vida futura, han reconocido cuán útil es á la so
ciedad.
a tumba, y que la muerte no es mas que una trans
figuracion gloriosa.» -
«Es muy ventajoso, dice Plinio (Hist. nat. l. 2, e.
Pero las pruebas sacadas del conocimiento del »7), que se crea que los dioses intervengan en las
hombre son menos decisivas todavia que las que se »cosas humanas; que si los malhechores tardan mu
toman del de Dios, que, sin la ¿d del alma, »chas veces en ser castigados á causa de la multitud
no seria juslo ni sabio. La sabiduria y la justicia di » de cuidados con que Dios está ocupado, jamás se
vina serian profanadas, si la nada fuera el único cas » libran del castigo , que el hombre no ha sido criado
tigo de los malos. M. de la Luzerne, dice muy bien »semejante á Dios para igualarse á los brutos por sus
(Disertacion sobre la ley natural, c. 3). «Si no hay » inclinaciones.»
una sancion en otra vida, no hay virlud sobre la tier «Si todos los hombres, dice á su vez Spinosa (Trai
ra, ni Dios en el cielo. El quitarle sus causas es des »té theol. pol. c. 5), fueran de un temperamento que
terrar la virtud; y el privarle de sus atributos es re » nada dejara que desear, con respecto á ser razona
ducir á Dios á la nada.» »bles, sin duda que para vivir juntos no tendrian ne
Oid como esclama J. J. Rousseau: «Cuanto mas en »cesidad de leyes: bastaria el instruirlos en una bue
tro en mí mismo y unas me consulto, mas grabadas »na moral... Pero la naturaleza humana está bien
veo en mi alma estas palabras: Sé justo y serás feliz. » distante de esla moderacion; todos miran por su in
Sin embargo, nada hay de esto al considerar el esta » terés... y van ciegamente á donde les, arrastra su
do actual de las cosas. El criminal prospera, y el jus »apetito. De aqui proviene que la autoridad y la vio
to permaneceoprimido. Véase tambien quéindignacion »lencia son las que sostienén las sociedades, y son
no se enciende en nosotros cuando se frustra esta es . » de absoluta necesidad las leyes que contengan la li
peranza! La conciencia se subleva y murmura con— »cencia desenfrenada de los hombres, y repriman su
tra su autor, ella le grita llorosa: Tú me has enga »insolencia. Despues de probar que el temor es un
ñado, ¿Yo te he engañado? ¡temerario! ¿y quién te lo » yugo qne los hombres siempre tienden a sacudir,
ha dicho? ¿Por ventura tu alma se ha añiquilado? » héaquí, añade, la razon que obligóá Moisés, divina
¿Has dejado de existir ?!Oh Brutus! ¡Oh hijo mio! no »mente inspirado, á introducir en su república la re
mancilles tu noble vida quitándolela; no dejes tu es— »ligion, á fin de que el pueblo cumpliera con sus de
peranza y tu gloria para los campos de Filipos. ¿Por » beres, mas por devocion que por temor.»
qué dices que la virtud nada vale, cuando vas ágo «En todos tiempos, dice Bayle, se ha reconocido
zar del premio de la tuya? ¿Crees tú que vas á morir? (Pensamientos sobre el cometa, S. 108 y 131) que la
No; tu vivirás, y entonces será cuando yo te cumpla religion era uno de los lazos de la sociedad, y qüe los
todo lo prometido.» súbditos jamás estaban mejor sujetos á la obediencia
«Si el alma es inmaterial, puede sobrevivir al cuer que cuando se sabia hacer intervenir oportunamente
» po: si le sobrevive la Providencia queda justificada. el ministerio de los dioses... No desagrada tanto á
» Aun cuando yo no tuviera otras pruebas de la in— Cardano una sociedad de ateos, por incapaz que fuera
» mortalidad del alma que el triunfo del delincuente y para servirse de los motivos de religion, con el objeto
» la opresion del justo en este mundo, esto solo meim de procurarse cierto grado de valor, y siendo mucho
»pediria el dudar de esta verdad. Una disonancia lan mas fácil de destruir que una reunion de gentes que
ºchocante en la armonia universal me induciria á sirven á los dioses; y aunque tenga alguna razon pa
»tratar de resolverla. Yo me diria: no concluye todo ra decir que la creencia de la inmortalidad del alma
» para nosotros con la vida, todo entra en orden con ha ¿? grandes desórdenes en el mundo por las
» la muerte. n. guerras de religion que siempre ha promovido, es
«Aun cuando se rompa la union del cuerpo con el falso, aunque no se consideren las cosas sino bajo
»alma, concibo que el uno puede disolverse y la otra el aspecto político, que haya acarreado mas mal que
» conservarse. Por qué la destruccion del uno tiene bien, como parece que quiere hacernos creer.» Bayle
» que arrastrar necesariamente la destruccion de la hace observar (Dici, crit. Saduceos Cont. despens,
» otra? Por el contrario, siendo de naturaleza tan di— dirin. S. 133) que el quitar el dogma de la inmorta
»ferente, se encontraban por su union en un estado lidad del alma, es quitar á la religion toda su fuerza
» violento: y cuando cesa esta union, entran los dos relativamente á la práctica de la virtud, lo que se
» en su estado natural. La sustancia activa vuelve á prueba por medio de dos reflexiones: «La una que
»adquirir toda la fuerza que empleaba en mover la »apenas es posible persuadir á las gentes que pros
»sustancia pasiva y muerta. Ahl lo conozco dema »perarán sobre la tierra viviendo bien, y que serán
»siado por mis vicios : , el homhre no vive mas que á » oprimidos bajo el yugo de la mala fortuña, y vivien
»medias durante su vida, y la vida del alma no co » do mal, porque la esperiencia parece probar lo con
» mienza sino con la muerte del cuerpo.» »trario; la otra que los ortodoxos pueden lisongearse
Para concluir, repetiremos las palabras del Sabio »con esta esperanza del mismo modo que los Saduceos,
Eccles. c. 3, y. 16 y 17. «He visto bajo el sol la im » teniendo ademas el recurso de la eternidad, se en
»piedad en lugar del juicio, y la iniquidad en lugar de »cuentran en mejor estado para hacer influir la reli
»la justicia: y yo he dicho en mi corazon; Dios juz— »gion sobre la moral práctica.» Tambien dice en otra
»gará lo justo y lo injusto, y entonces será el tiempo parte ( Dict, crit. Brutus): «Si no fueran á la par el
» del restablecimiento de todas las cosas.» »egercicio de la virtud y esos bienes que la Sagrada
Por lo tanto el dogma de la inmortalidad del alma » Escritura promete á los fieles en el porvenir, se pu
está sólidamente establecido. Tan solo añadiremos »dieran colocar la virtud y la inocencia en el núme
 ALM 71 ALM
» ro de las cosas sobre las cuales Salomon pronunció »sos y acreditados encuentran el secreto de eludirlas,
»su fallo definitivo: Vanidad de las vanidades, y todo » ha sido necesario imaginar un tribunal mas temi
»es vanidad. El apoyarse en su inocencia, seria lo »ble que el del magistrado. Se ha supuesto que con
» mismo que apoyarse en la caña rota que hiere la ma »la muerte entramos en una nueva vida, etc. Esta
»no del que quiera servirse de ella». » opinion, sin duda alguna, es el mas firme funda
Confiesa (Dict. crit. Epicuro) que Plutarco ha de »mento de las sociedades; ella es la que inclina á los
mostrado á los epicúreos de una manera sólida, que la » hombres á la virtud y los relrae ¿ crimen».
doctrina que niega la providencia de Dios y la inmor El autor de las Nuevas libertades de pensar, p. 151,
talidad del alma, priva al hombre de todo consuelo adversario de la existencia de Dios y de la e alma,
durante la vida y le reduce á la desesperacion y á la pone por fundamento de la moral al amor propio; y
muerte. concluye diciendo: «Conozco que esta ¿? peli
Son muy notables estas palabras de Bolingbroke »grosa; en general no es buena mas que para predi—
(0bras, t., p.328): «La utilidad de sostener la re »car á las gentes honradas, porque el vulgo jamás se
»ligion, y el peligro de descuidarla fueron muy visi » contendria por ese sentimiento delicado del amor pro
»bles durante todo el tiempo del gobierno romano. pio. ¿Pero este defecto depende de la misma moral»?
» Aunque la religion establecida por Numa fuera un Las últimas palabras contrastan singularmente con la
»absurdo, no obstante el temor del poder supremo, confesion que las precede.
» la creencia de una providencia que arreglaba todas Ultimamente Holbach hace observar (Sistema de la
»las cosas, produjeron los maravillosos resultados que naturaleza, t. 2, c. 13), que «en una sociedad nume
» Polibio, Ciceron, Plutarco y Maquiavelo les atribu— » rosa, fijada ya y civilizada, viniendo á multiplicarse
» yen. El olvido y desprecio de la religion fueron la »las necesidades y aumentarse los intereses, es indis
»causa principal de los males que Roma esperimentó pensable el recurrir á los gobiernos, á las leyes, á los
» despues: la religion y el estado decayeron en la mis » cultos públicos y á los sistemas uniformes de la reli—
» ma proporcion». »gion para mantener la armonia.... , y de este modo
Shaftesbury, que sostiene que el ateo puede cono »se encuentran poco á poco unidos al sistema religio
cer las ventajas de la virtud, añade (Investigaciones »so la moral y la política». -

sobre el mérito de la virtud, l. 1, p. 333: «No obs Cómo hombres que reconocian la grande utilidad
» tante, es preciso confesar que la inclinacion natural práctica de la creencia en la otra vida, se han atrevido
»del ateismo es muy diferente: tiende ha separar to á, poner en duda el dogma de la inmortalidad del
«da afeccion de lo que hay mas amable y mas digno alma?
» del hombre. ¿Se puede uno ver inclinado á amar ó Ahora se trata de saber si este dogma fue clara—
»admirar alguna cosa que haga relacion al orden del mente revelado y creido por los patriarcas y judios;
»universo, cuando se considera á este mismo univer nada hubo de esto, segun nuestros filósofos materia—
»so como un caos de desorden ? Nada es mas capaz listas; dicen que antes de la cautividad de Babilonia.
»de alentará la virtud y separar del vicio que la pre los judios no tenian la menor nocion de ello, que lo
»sencia de un Ser Supremo, testigo y juez de lo que obtuvieron de los caldeos ó de los persas; pero no nos
» pasa en el universo; y es un gran defecto del ateis dicen en qué escuela lo aprendieron los últimos.
» mo el separar esta causa..... Creer que las malas Nosotros respondemos en primer lugar que el soplo
»acciones, á las cuales somos arrastrados por pasiones de la boca del Señor no muere; pero no nos limita
»violentas, son castigadas por la justicia divina, es el mos á esta sola prueba. Despues del pecado de Adan
» mejor remedio contra el vicio, y el mayor estímulo y antes de condenarle á muerte, Dios le prometió un
«para la virtud». Redentor. ¿En qué podia interesarle esta promesa, si
David Hume es todavia mas enérgico (Essai, au no debia cumplirse durante su vida, y tenia que mo
vres, t. 3, p. 301): «Los que se esfuerzan en desenga rir por completo? Dios dice á Cain: Si haces bien, no
»ñar al género humano de esas especies de preocupa » recibirás la recompensa? Pero si obras mal, tu
»ciones (de religion), tal vez son buenos razonadores; »cado se levantará contra tí». Gén., c. , y .7. Sin
»pero jamás los reconoceré como buenos ciudadanos embargo, Abel, en lugar de recibir la recompensa de
»y buenos políticos, porque libran á los hombres de sus virtudes en este mundo, pereció con una muerte
»uno de los frenos de sus pasiones, y hacen mas fá violenta y prematura. Dios que en aquel tiempo ejer
» cil y segura la infraccion de las leyes de la equidad cia las funciones de lejislador y de juez, ¿hubiera po
»y de la sociedad». dido permitirlo, si no hubiera ni recompensas que es
Despues de haber pretendido que la opinion de la perar, nicastigos que temer despues de la muerte?
existencia de Dios no sirve de nada para hacer á los Abraham oyó de la misma boca de Dios estas pala
hombres mejores, el autor de la Carta de Thrasíbulo bras consoladoras: «Yo mismo seré tu mayor recom
á Leucippo se espresa de esta manera, p. 169 y 282: pensa». Gén, c. 15, y. 1. Era bien corta, si debie
«La generalidad de los hombres está bastante corrom ra limitarse á la vida presente. Qué le importaban á
»pida y es demasiado insensala para no tener necesi este patriarca las bendiciones que Dios le prometia
» dad de ser conducida á la práctica de las acciones derramar sobre su posteridad? Abraham compró una
» virtuosas, es decir, á la sociedad, con la esperanza de caverna para que sirviese de sepulcro á Sara su es
»la recompensa, y separada de las acciones crimina posa, y la dejó como en herencia á sus hijos. Jacob
»les por el temor á los castigos. Esto es lo que ha da uiso ser enterrado en ella y dormir con sus padres,
»do origen á las leyes; mas como estas no casti én., c. 7, y .30. La muerte no puede ser reputada
»gan ni recompensan las acciones secretas, y en las como un sueño, sino en cuanto que se espera desper
» sociedades mejor arregladas los culpables podero tar. Este patriarca, próximo á morir, reune á sus
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hijos: «Yo me muero, dice, enterradme en el sepul dos por los remo dimientos; y por qué los habian
cro de Abraham y de Isaac». Y, dirigiéndose á Dios de tener los segundos, si todo concluyera con esta
añade: Espero, Señor, de vos milibertad y salvacion». vida? -

Gén, c. 8, y.21; c. 9, y . 18 y 29. No se trataba ...” Para advertir á Moisés de su próxima muerte,
alli de curacion corporal; Jacob sabia muy bien que le dice Dios: «Tu dormirás con tus padres». Deut., c.
no se libraria de su enfermedad. 31, y. 16. «Sube sobre la montaña de Nebo; tu le
José, su hijo, en las mismas circunstancias, dice á reunirás en ella con tus parientes, como tu hermano
sus hermanos: «Despues de mi muerte Dios os visitará Aaron murió sobre la montaña de Hor y fue reunido a
» y os conducirá á la tierra que ha prometido á nues su pueblo». Ib., c. 32, y 9. Pero los parientes de
»iros padres Abraham, Isaac y Jacob..... Transpor Moisés y de Aaron habian sido enterrados en Egip
» lad mis huesos con vosotros». C. 50, y. 23. Esta or— l0: estos dos hemanos muertos en el desierto no
den fue ejecutada. Erod., c. 13, y 19. Si se nos pre p0dian reunirse por medio de la sepultura á su
gunta que en dónde está grabado el dogma de la in familia. Estas espresiones nos indican evidente—
mortalidad, responderemos con arrogancia: sobre el mente una morada para los muertos diferente de la
sepulcro de los patriarcas. tumba.
Job, reducido al colmo de la miseria no pierde el 5." David, admirado de la prosperidad de los pe
valor, pues dice: «Aun cuando Dios me quitara la cadores, de su insolencia y de su impiedad, habia si
vida, esperaria todavia en él», c. 13, y. 15. «Las pa. do tentado de desesperar de las recompensas de la
lancas de mi ataud llevarán mi esperanza, que des— virtud y de considerar á los justos como á unos insen
cansará conmigo en el polvo de la tumba». c. 16, y. satos. «Yo he querido comprender este misterio, di
17, Hebr. Con este motivo Salomon dice en los prover ce, me ha costado mucho trabajo, hasta que he entra
bios, c. 1, y.32, que el justo espera aun en la muer do en el secreto de Dios y he considerado su último
le. Qué podria esperar si muriera para siempre? fin». Ps. 72, y. 16. Este escándalo no se hubiera di
Es indudable que los egipcios creian no solo en la sipado, si unos v otros consideraran la muerte como
inmortalidad del alma, sinó tambien en la resurrec— último fin. - -

cion futura: por esto embalsamaban los cuerpos. Los 6.º, Salomon su hijo hace lo mismo en el Eclesias
israelitas permanecieron mas de doscientos años entre tés; al principio usa del lenguaje de un epicúreo,
los egipcios é imitaron su costumbre de embalsamar; que juzga que todo concluye en la lumba, que los
seria posible que no hubiesen adoplado la misma buenos y los malos tienen el mismo destino. «Quién
creencia, si ya no la tenian por medio de la tradicion sabe, dice, si el espíritu de los hijos de Adan sube
de sus padres? Poseemos pruebas demasiado positivas hácia arriba, y el de los animales desciende á la lier
para poder dudar de ello. ra?.... Todos mueren del mismo modo; los muertos
1.” Moisés les prohibió el interrogará los muer no sienten ni conocen nada: no hay ya recompensa
los para saber de ellos las cosas ocultas, como hacian para ellos y su memoria cae del mismómodo en el ol
los cananeos, Deut., c. 18, y 11. A pesar de la prohi vido: limitémonos, pues, á gozar del presente, elc.;.»
bicion, continuaron practicando esta supersticion. Pero al momento refuta este lenguaje impio. «No di
Saul hizo evocar por una pilonisa el alma de Samuel, gais: No hay providencia, por temor de que Dios,
que le dijo: «Mañana, vosotros y vuestros hijos sereis irritado con este discurso, no confunda todos vuestros
connigo». I Reg., c. 28, y . 11. Isaias habla tambien proyectos. Temed á Dios. c. 5, y. 5. Vale mas irá
de este abuso, c. 8, y 19; c. 65, y ... No hubiera te una casa donde reina el luto, que á aquella en que
nido lugar esta práctica en una nacion convencida de se prepara un festin; en la primera el hombre es ad
que los muertos no subsisten. Por esta misma razon vertido de su último fin, y aunquelleno de vida, pien
todo hombre, que habia tocado un muerto, era re sa en lo que debe acontecerle, c. 7, y. 3. Porque los
putado como impuro. criminales no son castigados desde luego, los hijos de
2.” Al ofrecer á Dios las primicias de los frutos los hombres hacen el mal sin temor; no obstante,aun
de la tierra, un israelita estaba obligado á protestar, que el impío haya pecado cien veces impunemente,
que nada de aquello habia sido empleado para un uso está seguro que aquellos que temen á Dios prospera
impuro, y que nada habia dado al muerto. Deut., c. rán á su vez. c. 8, y. 11. Regocijaos durante vuestra
26, 3. 13. El uso de presentar ofrendas á los manes juventud desde temprano: pero tened, entendido que
ó á las almas de los muertos, de cortarse los cabellos
Dios será eljuez de iodo esto. c. 11, 3.9. Acordaos
y la barba y ponerlos en su féretro, de derramar de vuestro Criador en aquel mismo tiempo antes de
sangre por su honor, supone evidentemente la creen que llegue el momento, en el cual el polvo vuelva á
cia de la inmortalidad del alma: todas estas supers la tierra de donde ha salido, y en el cual el espíritu
liciones fueron prohibidas á los judios, porque esla vuelva á Dios que le ha dado. c. 12, y . 1 y 7. Temed
han inclinados á caer en ellas. Lecit., c. 19, y, 27; á Dios y observad sus mandatos; esto es lo esencial
Deut., c. 1, y, 1. No habria necesidad de esto si no para el hombre; Dios entrará en juicio con él por todo
hubieran tenido ninguna nocion de la otra vida. el bien y mal que haya hecho. c. 13». Cómo los epi
3.° El profeta Balaam, dice, Num., c. 23, y 10: cúreos de nuestros dias se han atrevido á afirmar que
«Que mi alma muera con la muerte de los justos, y Salomon pensaba como ellos? - - - "

que mis últimos momentos sean semejantes á los su 7.” Elias, queriendo resucitar á un niño dice á
yos». Qué diferencia puede haber entre la muerte de Dios: «Señor, haced que el alma de este niño vuelva
losjustos y de los pecadores, si no hubiera nada que á su cuerpo.». El historiador añade que el alma de
esperar ni temer despues de la muerte? Losprimeros, uel niño volvió á él y resucitó. III. Reg., c. 17, }.
in duda alguna, están tranquilos y no se ven acosa 20. No es el único prio de esta clase referido en
 ALM 73 A.M.

los libros santos. Los materialistas han creido alguna la resurreccion futura de los cuerpos. Formó este dog
vez en las resurrecciones? ma capital la base de toda su moral; con esto conso
8.” Isaias nos asegura que los justos, muertos, ló y animó á la virtud, hizo temblar al crímen, for
descansan en el lugar de su sueño, porque han mar mó discípulos capaces de morir como él, bendicien
chado rectos. c. 57, y. 1 y 2. Supone c. 1, y.9, do á Dios, é impuso mas de una vez silencio á las
que los muertos hablan al rey de Babilonia cuando frívolas objeciones de los saduceos. Cuando quisieron
va á unirse á ellos, y le vituperan su orgullo. argumentar contra el dogma de la resurreccion futu
Todos estos autores sagrados que acabamos de ci ra les dijo: «¿No habeis leido lo que Dios ha dicho: Yo
tar, vivieron antes de la cautividad de Babilonia; sin soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob? No es el
embargo usan del mismo lenguaje que los que vivie Dios de los muertos, sino el de los vivos.» Matth. c.
:on despues, como Daniel, Esdras, los autores de los 22, 3.31. Efectivamente, estos patriarcas no habian
libros de la Sabiduría, del Eclesiástico y de los Maca sido recompensados en esta vida, de sus virtudes y del
heos. Esta uniformidad en las espresiones, en la con culto que rindieron constantemente á Dios; era pre
ducta, en las leyes y en los usos, nos parecen mas á ciso que Dios les premiara en otra vida; y si ellos vi
propósito para probar el hecho de la creencia cons ven, ¿por qué no han de resucitar?
tante de los patriarcas y de los judios, que una di Jesucristo, dice S. Pablo, ha puesto bien en claro la
sertacion filosófica sobre la naturaleza y el destino vida y la inmortalidad por el Evangelio. II. Tim. c. 1,
del alma humana, aun cuando hubiera sido hecha y. 10. Si no ha dicho de la vida futura todo lo que
por uno de los hijos de Adan. quisieran los filósofos, para satisfacer su curiosidad,
Los egipcios, los cananeos, los caldeos, los per nos ha enseñado lo suficiente para confirmar la fé de
sas, los indios, los chinos, los escitas, los celtas, los los justos, y atemorizar á los pecadores.
antiguos bretones, los de las Galias, los griegos y los Celso y los demas filósofos enemigos del cristianis
romanos, y aun los salvajes mismos, han creido en mo han ridiculizado el dogma de la resurreccion de
todos tiempos la inmortalidad del alma. Sobre esta los cuerpos; pero no se han atrevido á afirmar nada
tradicion, universal fundaban Platon, Ciceron y los acerca del estado de las almas despues de la muerte:
demas filósofos, la opinion que tenian de ella mucho quisieron mejor quedar en una ignorancia que favo
mas que sobre sus demostraciones. Y los disertado recia sus vicios, que abrazar una doctrina que les
res modernos tratan de persuadirnos, que por una hubiera escitado á la virtud. Ya no viene bien des
escepcion, única bajo el cielo, ignoraban los judios pues de mil y selecientos años de luz, el querer re
profundamente esta verdad, y que no se hace men cordar las antiguas tinieblas, relativamente á la na
cion de ella en sus libros! turaleza y destino del alma humana.
Convenimos que entre los paganos, la creencia de * II Bis. Jamás han podido demostrar
la inmortalidad del alma, jamás formó parte de la re de un modo incencible los dogmas de la espiritualidad
ligion pública; ninguna ley hacia sagrado este dogma é inmortalidad del alma, por carecer de las luces de la
importante: se p0dia admitirle ó negarle sin correr revelacion, Esta proposicion de Bergier puede apoyar
el nenor peligro. Esto es lo que demuestra principal se en muchos testimonios.
mente cuán incapaz era la religion pagana de con S. Justino (Ad gracos cohort), hablando del orí
tribuir á la pureza de las costumbres, y cuánta ne gen del mundo, de la creacion del hombre y de la
cesidad tenian los pueblos de una religion mas sabia inmortalidad del alma, declara que el hombre no pue
y santa. de con las solas fuerzas de la naturaleza ó del enlendi
Cuando Jesucristo se presentó en la tierra, la filo— miento humano, conocer esas sublimes verdades; que
sofia epicúrea, las fábulas de los poetas acerca de los es preciso referirnos á la tradicion de nuestros padres,
infiernos, y la corrupcion de las costumbres, habian los que, no enseñando nada por sí mismos, nos han
destruido casienteramenle entre los paganos la creen transmitido la doctrina que recibieron de Dios. Qui
cia de la inmortalidad del alma. A pesar de los argu omni contentionis studio, et factionum dissidio liberi,
mentos de Platon y de Ciceron, nos dice Juvenal, que sicuti á Deo aeceperant, ita nobis doctrina tradiderunt.
entre los romanos, ninguno, esceptuando los niños, Neque enim, vel natura, vel ingenio humano, res tam
creia en la fábula de los infiernos. Por un antiguo há sublimes et divinas hominibus cognitione assequi est
bito, se honraba todavia á los manes ó á las almas posibile; sed eo quod tum calitus in viros sanctos des
de los muertos, y se hacian apoleosis; pero nadie sa— cendit, gratuito opus est dono.
bia qué pensar acerca del estado de aquellas almas. Descartes (Carta á la princesa Isabel) dice espresa
La fé en la vida futura, para nada entraba en la mo mente: «Dejando aparte lo que la fé nos enseña, con
ral; no quedaba mas apoyo á la virtud, que el ins fieso, que por la sola razon natural, podemos muy
linto de la naturaleza y un débil presentimiento de bien hacer muchas conjeturas á nuestro favor, y
los castigos y recompensas futuras. Esta misma fé es lisonjearnos con esperanzas, pero no tendremos se
laba minada entre los judios por los sofismas de los guridad alguna.»
saduceos; se conocia la necesidad de un maestro mas Veamos cómo se espresa Leland (Nueva demostra
imponente que los doctores de la ley y los filósofos. cion evangélica, part. 3, c. 1): «Si los hombres no tu
El Hijo de Dios anunció la vida eterna para los jus. vieran mas cereza de un estado futuro que la que
los y el fuego elerno para los malos: fundó este dog pudieran adquirir con las solas luces de su razon,
ma, no sobre argumentos filosóficos, sino sobre su este dogma se encontraria combatido por objeciones
alabra, que era la de Dios su Padre; lo probó por dificultades que presentarian á su entendimiento
as resurrecciones que obró, y por su propia resur udas, á las cuáles seria muy difícil responder de una
reccion: aseguró la vida eterna del alma, y ademas manera satisfactoria. Su fé se encontraria alterada y
 ALM 7) A LM
debilitada. Los argumentos metafísicos, tomados de creido, asi como el mayor número de filósofos, que las
la diferente naturaleza del cuerpo y del espíritu, aun almas son una parte de la sustancia divina, y que
que justos en sí mismos, no son acogidos mas que por han salido de ella por emanacion. Beausobre en par—
almas verdaderamente filosóficas, acostumbradas á ticular, en su Historia del maniqueismo, l. 6, c. 5,
las especulaciones abstractas; no estan al alcance del
S. 9, ha tratado de probar este hecho, y se ha servi
comun de los hombres, que acostumbrados á los ob do de él para refutar ó eludir los argumentos con que
jetos sensibles y materiales, no pueden formarse una los Padres atacaron á los maniqueos. Como esto seria
nocion distinta de un ser que no es materia.... Los un error grosero y daria lugará consecuencias muy
que creen mas firmemente en la inmortalidad del falsas, será bueno saber si los Padres cayeron efec—
alma, les cuesta mucho trabajo el concebir cómo tivamente en él.
obra, cuando se encuentra separada del cuerpo. 1." Es muy dificil creer que los Padres, que en—
«La vida futura no nos es sensible: es un estado señaron formalmente que Dios ha criado los cuerpos
del cual no tenemos naturalmente ningun conoci— ó la materia, hayan dudado de la creacion de los es—
miento, y del que no podriamos formarnos una idea píritus; ¿es mas difícil lo uno que lo otro? Los antiguos
clara y satisfactoria si no tuviéramos otras luces acer filósofos no admitieron las emanaciones, sino porque
ca de esto mas que las de la razon. Esta vida futura rechazaban el dogma de la creacion; desde que los
es el objeto propio de la revelacion divina y del ejer Padres profesaron este dogma, no sé qué razon podian
cicio de la fé, que es la evidencia de las cosas invi tener para creer la emanacion de los espíritus. 2."
sibles. Como el alma humana no existe por la nece Beausobre, despues de haber citado un pasage de Ma
sidad de su naturaleza, sino que la continuacion de nes, que dice que la primera alma emanó del Dios de
su existencia depende de la voluntad de Dios, nos la luz, añade que es preciso no tomar estas palabras
otros no podemos estar seguros de su inmortalidad, en su significacion la mas estricta; que pueden signi
mas que en tanto que tengamos esta misma seguri ficar solamente que el alma, fue enviada de parte de
dad de que Dios quiere que sea inmortal. Muchas Dios; pero en los pasages de los Padres que cita se
razones nos inducen á creer que Dios lo ha dispuesto atiene solo á las palabras, ó las toma en el sentido
asi; pero era necesario para que tuviéramos una cer— mas rigoroso. 3.° No quiere que se imputen á los ma
teza completa, que Dios, nos lo revelara espresa— niqueos las consecuencias que se originaban de su
mente. Las pruebas morales de un estado futuro son doctrina, porque las negaban estos herejes; pero ha
tambien del mayor peso; mas las miras de la Provi tenido el mayor cuidado en ensalzar todas las conse
dencia nos estan ocultas; es un abismo que no debe cuencias de las opiniones falsas que atribuye á los Pa
mos esperar sondear. Nuestra vista es demasiado dres, aunque estos no las hayan admitido jamás. Tal
corta, conocemos muy poco los designios de Dios y es el método que sigue en todo su libro. Pero veamos
las leyes que sigue en el gobierno del mundo, para los pasages que le sirven de pruebas.
que con ella podamos adquirir las luces necesarias En el diálogo de S. Justino con Trion, n.° 4, este
para disipar enteramente nuestras dudas é incerti judio le pregunta si el alma del hombre es divina é
dumbres sobre un objeto tan delicado. Solo la reve inmortal; si es una parte del Espíritu soberano, re
lacion podia fijar nuestras ideas y creencias.» gia mentis partícula; si del mismo modo que este Es
Carlos Bonnel (Investigaciones filosóficas sobre las íritu ve á Dios, podemos esperar el ver en espíritu á
pruebas del cristianismo, c. 2), establece, que nada a Divinidad y ser de esta manera felices. Segura
puede asegurarse, con las solas luces de la razon, mente, responde S. Justino. Lo que precede prueba
acerca de la certeza de un estado futuro. V. CERTI claramente, 1.º: que por el Espíritu soberano que ve
DUMBRE, LEY NATURAL, RAzoN, REVELAcioN. á Dios, S. Justino entiende el Espíritu Santo; 2." que
lo único de que se trataba era de saber si el alma po
III. dia ver á Dios. Asi, la respuesta afirmativa de S. Jus
tino recae directamente sobre esta parte de la cues
Del orígen del Alma. tion, y no sobre lo que antecede. Beausobre truncó el
pasage para persuadir lo contrario. 3 º S. Justino
La creencia general de la Iglesia cristiana es que declara, ibid. n.° 4, que no cree, como Platon, que
las almas humanas son la obra inmediata del poder el alma es increada, AGENNETos, é indestructible por
divino, y que Dios les dió el ser por creacion. Este su naturaleza como el mundo. «Yo no creo sin em
sentimiento está fundado á la vez sobre la Escritura bargo, dice, que perezca ninguna alma» Si hubiera
Santa, que dice, que Dios ha creado todas las cosas pensado que el alma era una porcion de Dios, habria
sin escepcion, y sobre la nocion clara que tenemos de creido que pudiera ser aniquilada ?
la naturaleza de los espíritus. Pues que son seres En el fragmento de una obra sobre la resurreccion
simples, sin estension y sin partes, un espíritu no futura, nº 8, S. Justino reprende á aquellos que de
de desprenderse de la sustancia de otro espíritu; lue cian que el alma es incorruptible, porque es una par—
go no puede salir de él por emanacion, como un te y un soplo de Dios; pero que no sucede asi con la
cuerpo sale de otro cuerpo en el cual estaba conteni carne. «¿Seria pues, dice este Padre, una prueba de
do. O es indispensable que las almas sean eternas y » poder ó de bondad por parte de Dios, el salvar lo
sin principio como Dios, ó es necesario que hayan » que debe salvarse por su propia naturaleza, que es
empezado á ser por creacion: » una porcion de sí mismo y de su aliento? Esto seria
No obstante algunos sabios críticos protestantes «lo mísmo que conservarse á sí mismo.» Yo creeria,
pretenden, que no ha sido esta la opinion de los an dice Beausobre, que este raciocinio de Justino es un
tiguos Padres de la Iglesia, que la mayor parte han argumento ad hominem si no estuviera esplicado con
 ...»

ALM 75 ALM
loda claridad en su disputa con Trion. Ahora bien no puede ser estinguido porque viene de Dios.... Dios
cabamos de ver que esta esplicacion es enteramente le ha hecho salir de sí por su propio soplo.» Ade.
contraria á la opinion de Beausobre; luego el único Praaream, c. 5, dice que el animal racional, no solo
objeto de S. Justino en el pasage que examinamos ha sido hecho por un óbrero inteligente, sino que ha
es el probar que los que niegan la resurreccion de la sido animado con su propia sustancia. Nada hay mas
carne raciocinan mal.
formal. En la equidad natural esta el juzgar de las
Taciano, su discípulo, contra Graecos n.° 7, dice: opiniones de un autor por sus raciocinios mas bien
«El Verbo divino ha hecho al hombre imágen de la que por sus espresiones. Pues bien, Tertuliano, en su
inmortalidad; de manera que asi como Dios es in— libro contra llermógenes, que sostenia que la materia
mortal, del mismo modo ¿?
hombre, hecho partici— era eterna é increada, prueba que Dios es criador,
pante de una porcion de Dios, posee tambien la in solo, elerno, que todo lo que existe ha sido creado de
mortalidad; pero antes de crear al hombre, el Verbo la nada, esta es la conclusion de su obra. Asi, por el
creó á los ángeles.» Es constante que por esta porcion soplo del Espíritu de Dios, entiende el efecto de un
de Dios, Taciano y S. Justino, su maestro, entienden soplo creador; de otra manera esta espresion seria
al Espíritu Santo; si esta porcion fuera el alma del ininteligible. En su libro de ánima, c. 1, dice que ha
hombre, seria un absurdo el decir que el hombre ha tratado contra Hermógenes del origen del alma, de
bia sido hecho participante de ella. N.° 12. «Nos— censu animaº, que ha probado que no ha sido sacada
otros conocemos dos especies de espíritu, diceTaciano: del seno de la materia, sino del soplo de Dios; pnes
una se llama el alma; la otra, mas escelente, es la imá que este soplo es creador, es preciso que el alma haya
gen y semejanza de Dios. Los primeros hombres te empezado á ser por creacion. Esto es tambien lo que
nian la una y la otra, de suerte que en parte eran prueba Tertuliano, c... «Pues quenosotros sostenemos
materia, y en parte eran superiores á esta misma.» que el alma, dice, viene del soplo de Dios, debemos
Beausobre, l, 7, c. 1, n. 1, concluye de este pasage que por consiguiente atribuirle un principio: asi enseña
los Padres, asi como los maniqueos, adinitian dos mos contra Platon que ha nacido y ha sido hecha
almas en el hombre. Nueva falsedad; jamás pen porque ha tenido principio.... Es permitido el espre
saron los Santos Padres que el Espíritu Santo fuese sar por el mismo término, ser hecho, ser engendrado,
una parte del alma humana. recibir el ser, porque todo lo que ha empezado á ser
San Clemente de Alejandria, Strom, l. 6, p. 663, y recibe el nacimiento; y se puede llamará un obrero
S. Ireneo, l. 5, c. 12, n.° 2, se espresan de la misma el padre de lo que ha hecho. Asi, segun nuestra fé
manera; todos han pensado que el alma es inmortal que enseña que el alma ha nacido ó ha sido hecha, la
¿ la virtud del Espíritu Santo, y no por su natura Escritura profética refuta la opinion de Platon.» Aho
eza, porque ha sido creada: ahora bien, si fuese una ra bien, Platon admitia las emanaciones de los espí
porcion de la sustancia divina, seria inmortal por su ritus porque rechazaba la creacion.
misma naturaleza, y seria increada, Ibid., c. 10 y sig. Lejos de distinguir dos sustancias
San Metodio (Sympos. Virg., p. 7), dice que la se ó dos partes en el alma, refuta esta opinion como un
milla humana contiene, por decirlo asi, una parte di error de los filósofos.» El alma, dice, c. 1, es una y
vina del poder creador. Beausobre suprimió estas pa simple, toda entera en sí, de suo tota est; no puede ser
labras, por decirlo asi, que demuestran que no es ne— compuesta sin ser divisible y destructible, etc.» Des
cesario tomar al pie de la letra este pasage; significa pues de una profesion de fé tan clara, no concebimos
tanprocrear
de el hombre ha recibido de Dios el poder cómo se puede acusar á Tertuliano de haber creido á
solo que hijos. sº
el alma corporal, y sin embargo emanada de la sus—
El autor de las Falsas clementinas, Homil. 15, n.º tancia de Dios, y de haber distinguido el alma del es
16, dice que el alma procedente de Dios es de la mis píritu ó entendimiento. Tan solo distinguió en el alma
ma sustancia que él, aunque las almas no sean dioses: las facultades y las operaciones, como la vida ó la res—
es decir, que el alma es espíritu como Dios; pero el piracion, el poder de moverse ó sentir, la inteligen
autor no dice que sea una parte de su sustancia. cia ó el entendimiento y la voluntad: lo mismo ha
Segun Lactancio, lib. 2, c. 13. «Habiendo formado cemos en el dia. ¿Qué prueba lo que ha dicho como
Dios el cuerpo del hombre, le sopló una alma del ma de paso en el libro contra Praxeas, en el que trataba
nantial vivificante de su espíritu que es inmortal... El de otra cosa muy diferente de la naturaleza del alma?
alma, por medio de la ¿ vivimios, viene del cielo y Nada absolutamente. Puede decirse, sin tenor de
de Dios, al paso que el cuerpo proviene de la tierra.» errar, que el hombre ha sido animado por el soplo
Si esto prueba que el alma es una emanacion de la de Dios, soplo creador emanado de la propia sus
naturaleza divina, es necesario atribuir este error á tancia de Dios; pero este soplo ha sido la causa efi
Moisés: Lactancio no hace mas que repetir sus es ciente del alma, y no el alma misma. Cien veces se
presiones. ha dicho que el alma es un soplo divino, porque lo es
Tertuliano es mas oscuro; segun su costumbre, al en efecto, y no una emanacion de la sustancia de
hablar del alma, prodiga las metáforas; si se toma todo Dios. Leemos en Job, c. 33, y ... «El soplo del Todo
al pie de la letra, no hay error que no pueda imputár poderoso me ha dado la vida.» No han dicho mas
sele. Lib. de anima, c. 11, dice que el alma no es pro los Padres.
piamente el espíritu de Dios, sino el soplo de este es Por último, Beausobre ha citado á Synesio, que lla
píritu. Distingue el espíritu ó entendimiento del alma: ma á el alma del hombre la simiente de Dios, una
le llama el asiento natural del alma, lo que tiene de chispa de su espíritu, hija de Dios, una parte de Dios;
mas principal y divino, c. 12. «Este entendimiento, pero Synesio se espresa de esta manera en las poesias
dice, puede ser oscurecido porque no es Dios; pero y metáforas; en los poelas no son argumentos de
 ALM 76 ALM
metafísica. Es un absurdo el quererlos tomar en todo el panteismo es absolutamente incompatible con el
el rigor de la palabra, al mismo tiempo que Beausobre dogma de la creacion.
no quiere que se obre del mismo modo respecto de 1.”, Los pitagóricos y los estóicos suponen, los
los hereges. unos, la eternidad del mundo; los otros, la eternidad
Convenimos en que la cuestion del origen del alma de la materia; en la hipótesis de la creacion nada es
es muy oscura, sobre todo cuando nos atenemos á las eterno mas que Dios; todos los demas séres han em
nociones filosóficas: ha habido acerca de este punto pezado, l Dios los ha sacado de la nada por solo su
tres ó cuatro opiniones diferentes entre los antiguos. querer. El ha dicho, y todo fue hecho.
Unos han creido la preecsistencia de las almas, como 2.". Segun la doctrina de los estóicos, Dios, iden
Orígenes; pero suponia que Dios las habia sacado de tificado con el mundo, no era libre para dirigir los
la nada todas á la vez; otros pensaron que Dios las movimientos del mismo á su voluntad; estaba sujeto
cria en detalle, á medida que los cuerpos humanos son á las leyes eternas é inmutables del destino: la Po
engendrados; muchos imaginaron que el alma de videncia no era otra cosa Inas que la cadena sucesi
Adan fue sacada de la nada, y que todas las demas va y necesaria de esas mismas leyes. Por esto esos fi
roceden de esta por via de propagacion, ear traduce. lósofos se lisonjeaban de absolverá la Providencia de
or lo que respecta al sistema de la emanacion de las los males de este mundo. En vano los críticos anti
almas fuera de la sustancia de Dios, ha sido la opi guos ó modernos han querido suavizar la rigidez del
nion de los filósofos y no la de los doctores de la Iglesia, destino, diciendo que Dios ha mandado una vez, y
que todos han admitido la creacion. El mismo S; Agus que despues obedece siempre; semper paret semel
tin, que en su carta 143 á S. Marcelino, y en la diri jussit. Si ha mandado libremente una vez es respon
¿? Optato refiere cuatro opiniones tocante al ori sable de las consecuencias de su propia ley; si lo ha
gen del alma, no hace ninguna mencion de las ema hecho por necesidad, es mas bien una obediencia que
naciones. Por lo demas, es falso que una de estas opi un mandato. Segun la doctrina de nuestros libros san
niones sea mas cómoda que las demas para resolver los, Dios gobierna al mundo tan libremente como lo
las dificultades que se presentan sobre el origen del ha creado: suspende cuando quiere el efecto de las leves
mal moral. Los críticos protestantes no se han obsti º él mismo ha establecido: podria aniquilar al mun
nado en atribuir á los Padres de la Iglesia el sistema o sin perder nada de su ser: y con un poco de re
de las emanaciones, que ha sido el de los filósofos y flexion es muy fácil justificar su Providencia.
antiguos hereges, mas que por tener la satisfaccion de 3." En la hipótesis del alma del mundo, Dios no
deprimirlos, y cualquiera diria que han tratado de es un ser simple; no solo está compuesto de un cuer
hacer la corte á los socinianos. V. EMANacioN. po y un alma, sino que todas las almas de los hom
bres, de los animales y de los elementos no son mas
ALMA DEL MUNDO. El sistema de Pitágoras, que partes de la grande alma que da la vida a todo.
de los estóicos y de los demas filósofos era que el mun De aqui resulta que todos los seres en movimiento son
do es un gran iodo, del que Dios es el alma, y en el otros lantos dioses particulares, tan dignos de ser ado
cual los diferentes cuerpos, como los astros, la tierra, rados los unos como los otros. Este es el fundamento
el mar, etc., son los miembros: que Dios está esparcido filosófico de la idolatria. Tambien en el tratado de Ci
por todas estas partes y las anima, como nuestra al ceron, de nat. deor. lib. 2, el estóico Balbo se esfuer
ma vivifica y hace mover todas las partes de nuestro za en probar que cada parte del mundo es Dios; que
cuerpo. Está opinion suponia que la materia es eter está animada, dotada de inteligencia y sabiduría, y
na, que Dios no la ha creado sino arreglado, y que adorable por consiguiente.
asi formó su propio cuerpo, que es el mundo. Algu .." De aqui se sigue que Dios es corporal, que
nos estóicos llevaban el absurdo hasta decir que el es la cansa de todos los cambios que sobrevienen en
mundo tiene un alma, que se ha hecho á sí misma y la naturaleza, que cualquiera de los miembros de Dios
al mundo; Habere mentem quae et se et ipsum fabrica perece cuando un cuerpo se disuelve, etc. Esta es la
objecion que el epicúreo Veleius hace á los estóicos,
ta sit. Cic. Acad. Cuest. l. 2, c. 37. Se pretende que
esta era tambien la opinion de los Egipcios. En esta ibid., l. 1, y que Orígenes repite contra Celso, l. 1, n.
hipótesis todas las partes de la naturaleza están ani 20. En vano Beausobre observa que Pitágoras nega
madas lo mismo que el hombre y los animales; todas ba esta consecuencia; que sostenia que la naturaleza
las almas particulares son porciones desprendidas de divina es una é indivisible; la pertinacia de un filó
la grande alma que mueve el todo; van á reunirse á sofo en sostener contradicciones no le escusa. Ningu
ella cuando el cuerpo particular que animan se di no de estos inconvenientes tiene lugar en la hipóte—
suelve. Cuántos errores no han sostenido los anti sis de la creacion.
guos filósofos por no admitir el dogma de la creacion?5. En la de Pitágoras y de los estóicos no se
Los ateos modernos y los materialistas, á fin de concibe mejor la espiritualidad de las almas que la
poner nuestra creencia en ridículo, dicen, que bajo de Dios: todas son partes de la grande alma, de la
el nombre de Dios no entendemos otra cosa mas que cual han sido desprendidas, y de la que han salido por
el alma del mundo ó el universo animado; que cae - emanacion,d á la que deben unirse y confundirse co
mos en el error de los estóicos; que, como ellos, ado mo la gota de agua que cae en el Océano. Luego los
ramos la naturaleza y nada mas; esto es lo que lla espíritus tienen partes, etc.? Beausobre emplea inútil
man el panteismo. . mente toda su industria para salvar también este ab
Si fueran de buena fé, convendrian por el contra surdo: Puede tener razon al sostener que esto no es
rio en que la revelacion mina este error por sus ci el espinosismo; º por lo menos es un error que se
mientos, enseñándonos que Dios ha creado al mundo: le aproxima mucho.
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6." Las almas, reunidas despues de la muerte En tercer lugar, el alma de un hombre no había
del cuerpo á la grande alma del universo, no tienen de ser menos que las demas, era una porcion de la
ecsistencia individual y personal; son incapaces de grande alma del universo, asi como la del sol, de la
lacer y dolor, de recompensa y castigo; supuesto el luna, de un rio ó de una fuente; debia pues rendír
estino, estan en todos tiempos privadas de la liber sele un culto lo mismo que á los demas seres; no ve
tad; este sistema destruye pues toda moral razonada. mos porqué un héroe, un hombre poderoso y bien he
El dogma de la creacion hace desaparecer todos es chor no habia de merecer un cultó religioso durante
tos absurdos. Dios, espíritu puro, es un Ser simple: ha su vida, lo mismo que despues de su muerte. Este
creado las almas lo mismo que los cuerpos, las ha do mismo sistema nada menos tendia que á justificar los
tado de libertad, y las ha dado leyes; las castiga ó las honores divinos, que los Egipcios rendian á los ani
recompensa eternamente, segun sus méritos. males. Seria enteramente inútil el llevar adelañte
El alma del mundo es por lo tanto un sueño filosó— los absurdos que de esto resultaban. No sin razon la
fico que nada tiene de comun con la doctrina revela sagrada Escritura condena con tanto rigor el politeis
da, es un error enevitable, desde el momento en que mo y la idolatria; de cualquier modo que se les con
no se admita la creacion. Pero el pueblo jamas tuvo sidere, son inescusables. Véanse estas dos palabras
conocimiento de este absurdo; ningun pueblo ha le en la Nueva demostracion evangélica de J. Leland,
vantado altares á el alma del mundo. Los paganos su t. 2, p. 250.
ponian tantas almas particulares en el universo, co
mo seres animados parece que ecsisten en el mismo; Alogos ó Alogianos, secta de antiguos here
adoraban estas inteligencias particulares, porque las ges, cuyo nombre trae su origen de A privativo, y
creian dotadas de conocimientos y fuerzas superiores de logos, palabra ó verbo, como si digéramos sin ver
á las del hombre, y dominaban á estos espíritus los bo; porque negaban que Jesucristo fuese el Verbo
inmortales. Los patriarcas y los judios adoraron al eterno. Rechazaban el evangelio de S. Juan , como
Creador del mundo, y le adoraron solo; le atribuye— una obra apócrifa, escrita por Cerintho; aunque este
ron una providencia general sobre todos los seres, y apostol no lo hubiese escrito mas que para confundir
una partícular respecto del hombre; nosotros le adol. á este herege, que negaba también la divinidad de
ramos como ellos, tenemos la misma fé que Dios se Jesucristo.
dignó enseñará nuestro primer padre, Algunos autores refieren el origen de esta secta á
Algunos deistas han querido justificar la opinion Teodolo de Bizancio, de oficio zurrador, pero no obs
de los estóicos: en este sistema, dicen, no hay mas tante, hombre ilustrado que habiendo apostatado du
que un solo Dios al cual se referia todo el culto que rante la persecucion de Severo, respondia á los que
los paganos rendian a las diferentes partes de la na le vituperaban este crímen, que no habia renegádo
turaleza; no ha habido, pues razon para acusarlos de mas que á un hombre, y no á Dios, y de aqui, sus dis
politeismo. Falsa reflecsion. - - cípulos que negaban la ecsistencia del Verbo, toma
En primer lugar, era un absurdo el dirigir un cul— ron el nombre de AlogoN; «Decian, añade M. Fleury,
to á un ser sujeto á las leyes supremas del destino le que todos los antiguos y aun los apóstoles habian re
yes inmutables que no pueden cambiar ni las buenas cibido y enseñado esta doctrina, y que habia sido con
ni las malas acciones de los hombres. Los estóicos de servada hasta la época de Victor, que era el décimo
cian que los dioses de Epicúro eran absolutamente tercio obispo de Roma desde S. Pedro; mas qne Ze
nulos; que era ridículo el honrarlos, porque no se ferino, su sucesor, habia alterado la verdad.» Pero
mezclaban en las cosas de aqui bajo; pero los epicú les oponian los escritos de S. Justino, de Milcíades,
reos podian muy bien desquitarse, sosteniendo que Taciano, Clemente, Ireneo, Meliton y otros antiguos,
tampoco dejaba de ser estravagante el adorar dioses que decian que Jesucristo era Dios y hombre ; Victor
sujetos á la fatalidad, que no podian hacer mas bien escomulgó á Teodoto; cómo le habia de escomul
ni mal á los hombres, que el que estaba determinado gar, si hubiera pensado del mismo modo? Hist. eccles.
por el destino inmutable. Si Dios no es libre en los de tom. 1. lib. , n. 33.
cretos de su providencia, toda religion es supérflua. Otros adelantan que fue S Epifanio el que en su
En segundo lugar, no es cierto que el culto rendi lista de las heregías les dió este nombre, pero otros
do á las diferentes partes de la naturaleza fuese diri Padres y un gran número de autores eclesiásticos ha
gido á la grande alma del universo. Un pagano que blan de los alogianos, como sectarios de Teodoto de -
adoraba al sol y le creia animado, estaba persuadido Bizancio. Véase Tertul. lib. des Presc, cap. último,
que el alma de este astro veia y conocia el culto que S. Agustin, de Haer. c. 33; Eusebio, lib. 5.... c. 19;
se le rendia, que le era grato, y podia hacerle bien ó Baronio, ad anno 196; Tillemont, Dupin, Biblioteca
mal. En general, los dioses no han sido adorados sino de los autores eclesiásticos, siglo I.
porque se les suponia inteligentes y poderosos, sus— x.

ceptibles de amoró de cólera. A el alma ó al espíritu Altar, plataforma de tierra, de piedras ó de ma

alojado en el sol es al que se dirigia el culto, sin re dera ¿? del suelo, y sobre la cual se ofrece un
montarse á mas altura ni ir mas lejos. Jamas se cre sacrificio. Desde luego se ve que altar viene del latin
yó que el soló cualquiera otro Dios esperaba las ór— altus, á causa de su elevacion. Los griegos le llama
denes de la grande alma del universo para hacer bien han TzUsYosER Yom , del verbo TzUEYN , matar, in -
ó mal á los hombres. Por lo tanto, habia realmente molar; los hebreos MIzbEAGH, de zABACH, degollar,
sacrificar. Este nombre se ha dado en la Escritura á
otros tantos dioses independientes los unos de los otros
como seres animados en la naturaleza. Si no es el po el altar de los holocaustos y al de los perfumes, y no
liteismo, cómo debe llamarse esta creencia? á la mesa de los panes de proposicion, sobre la cual
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nada se consumaba. Es muy importante esta obser El abate Renaudot, en su coleccion de las Litúr
vacion. gias orientales l. 1, p. 181 y 331, l. 2, p. 52 y 56,
Bajo la ley natural, los patriarcas levantaban al ha observado, despues del cardenal Bona, que en
tares en medio del campo, para ofrecer víctimas al todas las iglesias del Orienle, lo mismo que en la igle
Señor. Noé, Abraham y Jacob tenian esta costum sia latina, se ha considerado siempre el altar, no
bre. En la ley de Moisés, prohibió Dios á los israeli. como una mesa comun sino consagrada, sobre la
tas el ofrecer sacrificios en otra parte que en el ta cual se ofrecen en sacrificio el cuerpo y sangre de Je
bernáculo, y prescribió la manera con que los alta sucristo. El uso constante de consagrar los altares,
res debian ser construidos. Habia uno de ellos, deno las oraciones que se recilan, y las ceremonias que se
minado el altar delos holocaustos, sobre el cual se que hacen con este motivo atestiguan altamente que los
maban las víctimas, y otro en que se consumian los orientales comprenden con el nombre de altar la
perfumes; lo mismo sucedió cuando se construyó el misma idea que nosotros. Durante las persecuciones,
templo. Los altares que fueron erigidos por Jeroboam no era posible el tener altares macizos y sólidos; se
en Samária, y por algunos otros reyes, sobre parages veian obligados á hacer uso de mesas de madera y
elevados, fueron otros tantos crímenes cometidos con de altares portátiles. La especie de esclavitud en que
tra la ley; Dios castigó á sus autores. En la Hist. de están todavía los griegos ó melouilas, los sirios, etc.,..
la Academie des Inscript., t. 3, n. 12, p. 19 y t. , por los mahometanos, les obliga con frecuencia á
p. 9, se encuentra una historia esacta de los altares hacer lo mismo. Pero desde el momento en que hu
consagrados al verdadero Dios desde la creacion del bo libertad para levantar basílicas, se colocaron en
mundo hasta Jesucristo. ellas altares de piedra ó de marmol, y muchos de
ALTAR, entre los cristianos, es una mesa cuadrada ellos revestidos de adornos de plata y oro. Fleury,
situada ordinariamente á la parte oriental de la igle Costumbres de los cristianos, n. 35; Languet, del ver
sia, y sobre la cual se celebra la misa. Se le dió esta dadero espíritu d la Iglesia en el uso de sus ceremo
forma, porque Jesucristo estaba en la mesa cuando nias, p. 32.
instituyó la Eucaristía, y porque se ofrece sobre estaSin ninguna razon Daillé y otros escritores protes
tantes han querido persuadir que, en los escritos de
mesa el sacrificio del cuerpo y sangre de Jesucristo.
En la primitiva Iglesia, los altares no eran mas los Padres y en los antiguos monumentos eclesiásti
que de madera y se transportaban muchas veces de cos, el nombre de altar era tomado en un sentido
un lugar á otro; pero un cóncilio de Epaona del año abusivo, y no significaba mas que una mesa comun;
517 prohibió el construir altares de otra materia que y que asi, no se podia sacar de él ninguna conse
no fuera piedra. En los primeros siglos no habia mas cuencia, para probar que los antiguos. consideraban
que un solo altar en cada iglesia, pero muy pronto á la Eucaristía como un verdadero sacrificio. Hay
se aumentó el número; S. Gregorio dice que en su pruebas positivas de lo contrario: S. Pablo dice á los
tiempo, en el siglo VI, habia de doce á quince en cier hebreos, c. 13, y . 10: «Nosotros tenemos un altar,
las iglesias. En la catedral de Magdeburgo habia del cual los ministros del tabernáculo no tienen el po
cuarenta y dos. der de comer». En el cuadro de la litúrgia cristiana
El altar no está algunas veces sostenido mas que trazado por S. Juan, Apoc., c. , y. 2, vemos un tro
por una sola columna, como en las capillas sublerrá no ocupado por un personage venerable, á su alrede
neas de Santa Cecilia en Roma y en otras partes; á dor veinte y cuatro ancianos ó sacerdotes; delante
veces lo está sobre cuatro, como el de S. Sebastian, del trono, en medio de los ancianos, un cordero en el
in crypta arenaria; pero el uso mas comun es el de estado de muerte ó de víctima, c. 5. y. 6. que recibia
colocar la mesa de altar sobre un macizo ó cimiento los honores de la Divinidad, c. 6, y. 9; bajo el altar,
de piedras. las almas de los que fueron muertos por la palabra
Estos altares se asemejan algun tanto á las tum Dios. He aqui cierlamente el aparato de un sacri
bas. Efectivamente los primeros cristianos tenian mu CI0. -

chas veces sus reuniones en las tumbas de los már—
tires, y allí celebraban los santos misterios. En el
Apocalípsis se dice: «Yo ví bajo el altar las almas de
los que han sido muertos por la palabra de Dios, y
por el testimonio que le han rendido», c. 6. y., 9,
De aquí viene la costumbre de no consagrar un altar
sin poner en él reliquias de los santos.
El uso de la consagracion de los altares es bastante
antiguo, y la ceremonia está reservada para los obis
¿ Despues de no permitirse el ofrecer mas que so
S. Ignacio, instruido por S. Juan el evangelisía,
escribe á los de Filadelfia, n. 4: «Tened cuidado de
usar de una sola Eucaristía. No hay mas que una
carne de Ntro. Sr. Jesucristo, un solo, caliz, para
manifestar la unidad de su sangre; un solo altar, co
mo un solo obispo, con el presbítero y los diáconos».
En estos tres pasages, el griego dice Tzusvanservos;
este término jamás ha significado una simple mesa
de comer, sino un altar destinado á ofrecer sacrifi—
C10S,

re altares consagrados, se hicieron portátiles, para
hacer uso de ellos en los lugares en que no hay altar
solido consagrado: Hymmaro y Beda hacen mencion
de ellos. En lugar de altares portátiles los griegos se
sirven de lienzos benditos que llaman ANTvMyNsva, es
decir, que hacen de altares. Acerca de la forma, la
uecoracion y la bendicion de los altares véase el an
tiguo Sacramentario por Grandeolas, 1.° part, p. 33
y 610.
S. Ireneo, adv. Hoer. l. , c. 18, n. 6, hablando de
la Eucaristía, dice que Dios nos manda, como al an
tiguo pueblo, hacerle con frecuencia y sin interrup
cion nuestras ofrendas sobre su altar, aunque no ten
a necesidad de ellas. Grabe, al llegar aqui, no pue
¿ menos de convenir en que se trata alli de un al
tar propiamente dicho, y de un sacrificio en toda la
energia de la palabra. Orígenes, Hom. 10, in Josue,
halla de los fieles que hacian donativos para el ador
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no de las iglesias y de los altares. S.Cipriano, Epist. esos dioses celestes sobre las alturas, lesera mas agra
55, ad Cornel., opone la iglesia al Capitolio y los al dable, porque se estaba mas prócsimo á ellos, y se
tares del Señor á los de los ídolos. Eusebio, Hist. descubria mejor desde alli la estension del cielo; de
eccles. l. 7, c. 15, hace mencion de una iglesia y de aquí vino la costumbre de sacrificar sobre las mon
un altar en la ciudad de Cesarea bajo el reinado de tañas ó sitios elevados. Dios no desaprobaba esta ma
Galiano, y por consiguiente á mediados del siglo III. nera de ofrecer sacrificios, cuando se le dirigian á él
Los protestantes no pueden negar que los Padres del solo: mandó al patriarca Abraham inmolar á Isaac
cuarto siglo no hayan muchas veces dado el nombre sobre una montaña. Gén. c. 22, y. 2; dice á Moisés
de altará la mesa sobre la cual se consagraba la Eu
al pie de la nontaña de Horeb, Eacod. c. 1, y. 12:
caristía, y que no la llamaban altar sagrado. «Me ofrecerás un sacrificio sobre esta montaña.» Se
¿Mas cómo probarán que el sentido de este térmi preferian las montañas cubiertas de árboles, á causa
no no siempre fué el mismo, que S. Pablo y S. Juan de la comodidad de su sombra; y porque el silencio
no entendieron por él mas que una mesa de comer, de los bosques inspira una especie de terror religioso.
al paso que los Padres que vinieron despues lo toma No obstante, Dios prohibió esta costumbre á los
ron por una mesa de sacrificio? Estos dos apóstoles hebreos, porque los politeistas abusaban de ella, y
no pudieron confundir un altar con una mesa, puesto los hebreos estaban muy propensos á imitarlos. No
que estos dos objetos tienen un nombre diferente en ni altares muy elevados, ni árboles plantados
griego y en hebreo. Para comer se echaban los anti á su alrededor. Earod. c. 20, y. 2.; Deut, c. 16, y.
guos en camas; en ninguna parle leemos que los pri 21. Manda destruir los altares y los maderos sagra—
meros cristianos se colocáran en esta actitud para re dos colocados sobre las montañas en donde los idóla
cibir la Eucaristía, es preciso pues que no la conside tras adoran á sus dioses, Deut. c. 12, y. 2, porque
ráran como una cena ó comida, como lo hacen los todas estas alturas se han convertido en asilos de li
protestantes, sino como una ceremonia augusta y sa bertinage y de impiedad. Cuando los reyes piado
grada, digna del mas profundo respeto; y dieron tes— sos querian destruir eficazmente la idolátria entre
timonio de esto, por el modo con que adornaron los los israelistas, empezaban por hacer demoler las altu
altares desde que les fué posible y estuvieron en li ras y cortar los árboles, de que estaban cubiertas;
bertad de poderlo hacer. y cuando no se tomaba esta precaucion, el desorden
Los nombres YLADsERYoN, propiciatorio, TzusYADsER no se hacia esperar mucho tiempo.
YON sacrificatorio, mesa sagrada, &c., que losorientales
dieron siempre y dan todavia á los altares, no sig Alumbrados, nombre de una secta de here
nifican una mesa comun. Siempre que los paganos, ges que aparecieron en España hácia el año de 1575 y
los herejes y los mahometanos, derribaron y demo— que los españoles llamaban alumbrados. Sus gefes
lieron los altares, este acto de ódio ha sido conside eran Juan de Villalpando, natural de Tenerife, y una
rado por los cristianos como una impiedad y una pro monja carmelita denominada Catalina de Jesus. Un
fanacion. Se puede hacer la misma observacion res gran número de sus discípulos fueron puestos en la
pecto de los paños ó manteles de altar y de los vasos inquisicion, y castigados con la muerte en Córdoba;
sagrados; jamás los han tratado como muebles comu los demas abjuraron sus errores.
nes. En géneral los ritos, las ceremonias y los usos Se vituperaba principalmente á estos alumbrados,
religiosos atestiguan la creencia de los pueblos con el que decian que por medio de la oracion sublime á
unas energía que las espresiones de los teólogos. Cuan que llegaban, entraban en un estado tan perfecto
do los protestantes han demolido los altares en las que no tenian necesidad del uso de los sacramentos,
iglesias de que se han apoderado, han demostrado ni de las buenas obras; y que podian hasta cometer
suficientemente que querian destruir la antigua creen las acciones mas infames sin pecar. Molinos y sus dis
cia del cristianismo, tocante á la Eucaristía. cípulos, poco tiempo despues, siguieron los mismos
ALTAR DE PROTESIS, es una especie de creden principios.
cia, sobre la cual los griegos bendecian el pan desti Esta secta fue renovada en Francia en 1634, y los
nado para el sacrificio antes de llevarle al altar ma guerinetes, discípulos de Pedro Guerin, se unieron á
yor en donde se concluye la celebracion. Segun el ellos; pero Luis XIII los hizo perseguir con tanta eli
padre Goar, este pequeño atar ó credencia estaba en cacia, que desaparecieron en poco tiempo. Preten
otro tiempo en la sacristia. Los protestantes no usan dian que Dios habia revelado á uno de ellos, llamado
de tantas ceremonias para celebrar su cena; buena hermano Antonio Bocquet, una práctica de fe y de
prueba de que no piensan como los griegos. vida sobre eminente , desconocida hasta entonces en
ALTAR, se usa tambien en la Historia Eclesiástica toda la cristiandad; que con este método podia lle
para significar las oblaciones ó rentas casuales de la garse en poco tiempo al mismo grado de perfeccion
iglesia; rescatar los altares era rescatar estas rentas que los santos y bienaventurada virgen María, que
usurpadas por los seculares. Se llamaba la iglesia los segun ellos, no habian tenido mas que una virtud co
diezmos y las otras rentas fijas, y altares las rentas mun. Añadian que por este medio se llegaba á una
casuales. Cuando se dice que el sacerdote debe vivir tal union con Dios, que todas las acciones de los hom
del altar, se quiere decir que tiene derecho á vivir bres eran deificadas; y que cuando se habia llegado
de las rentas de la Iglesia. á esta union, era preciso dejar obrar á Dios solo en
nosotros, sin producir ningun acto. Sostenian que to
Alturas, colinas ó montañas sobre las cuales dos los doctores de la Iglesia habian ignorado lo que
los idólatras ofrecian sacrificios. Los adoradores de es la devocion; que S. Pedro, hombre sencillo, no ha
los astros estaban persuadidos de que el culto dado á bia comprendido la espiritualidad, lo mismo que San
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Pablo; que toda la Iglesia estaba en las tinieblas y en ellos. «No imiteis, dice Jesucristo, á los que buscan
la ignorancia sobre la verdadera práctica del Credo. los primeros puestos, los respetos y homenages de los
Decian que no es permitido hacer todo lo que dicta hombres.» Echa en cara este vicio á los fariseos,
la conciencia, que Dios no ama mas que á sí mismo, trata de preservar de él á sus discípulos. Math. c.
que era precisó que en diez años fuese recibida su 23, y. 6. Esta moral siempre será mas sábia que la de
doctrina en todo el mundo, y que entonces no habia los filósofos. Por medio de los paliativos y restriccio
necesidad de sacerdotes, de religiosos, de curas, de nes no ecsiste pasion que no se pueda llegará justi
obispos, ni de otros eclesiásticos superiores. Sponde, ficar.
Vittorio, Siri, etc. o S" Nada interesante debe parecer largo á los
amigos de la buena literatura, y en esta persuasion no
Amalecitas. V. AGAG. reparamos en trasladar la siguiente nota.— En los
dos estremos de los seres, se encuentran Dios y la ma
Amauri, teólogo de Paris, vivió á principios del teria. Nada quieren adquirir; la materia, porque no
siglo XIII. Enseñó que Dios era la primera materia; tiene facultades, y Dios porque las posee todas. En
que la ley de Jesucristo debia concluir el año 1200 tre estos dos abismos de la nada y de la inmensidad se
para dar lugar á la ley del Espíritu-Sano, que san encuentran los seres vivientes, dotados de una poten
tificaria á los hombres sin sacramentos y sin ningun cia que tan solo trata de engrandecerse porque siem
acto esterior; que los pecados cometidos por caridad pre está en accion. La del bruto corresponde á sus ne—
eran inocentes. Negaba la resurreccion de los muer cesidades, y se contiene en los límites que determinan
tos y el infierno, rechazaba el culto de los santos, de estas; la del hombre, aguijoneada por la inteligencia,
clamaba contra el Papa, etc. Tuvo sectarios muy per— no es un término en sus tendencias, porque los deseos
tinaces. Se perdonó á las mujeres: , pero diez de sus del alma son infinitos, y siempre trata de engrandecer
seductores sufrieron el último suplicio el año 1210. su ser, para aproximarse á su principio.
El concilio de Letran, celebrado en 1215, confirmó Tambien vemos aqui el amor propio dominando al
la condenacion de su doctrina. Amauri tuvo por su— hombre y haciéndole obrar. En tanto que no se separa
cesor á David de Dinant, que predicó la misma doc de ese camino trazado por su naturaleza, de ese ca
trina. Hist. de la Igles. gal. lib. 30, año 1210 y 1212. mino abierto para conducir á Dios las inteligencias,
Q. S" Sostenia, ademas de mil estravagantes er cn lanto que no se engaña en el fin á que debe con
rores, que el cristianismo solo consistia en creerse ducirle, trabaja realmente en su felicidad.
uno miembro de Jesucristo; que el paraiso, el infier Mas desgraciadamente acontece con demasiada
no y la resurreccion de los muertos eran sueños. Fue frecuencia, que el orgullo funesto que le atormenta
condenado por la universidad de Paris, y apelóá Ino desde su caida, dirige sus facultades hácia un fin
cencio III, quien le condenó tambien. Temiendo ser opuesto, y emplea sus fuerzas en seguir los vanos fan
castigado rigorosameete se retractó, y se retiró á San tasmas de felicidad. Entonces se erige á sí mismo un
Martin de los Campos, en donde murió de pesadum allar en su corazon, se considera como el fin último
bre y de despecho. Como el error siempre va en pro— de sus propios esfuerzos; aislándose de Dios, rompe
greso, en rigor de su falta de centro, vióse al punto los eslabones de la cadena de su destino, y se deja
que sus discípulos inventaron nuevas é impías aser— dominar por las cosas terrenas. No reina ya en su co
ciones. Cuéntase entre estas el decir que todos los sa razon ni la emulacion para hacer el bien y merecer
cramentos eran inútiles: te todas las acciones dic entre sus hermanos éiguales, ni para conseguir la co
ladas por la caridad, aun el adulterio, no podian ser rona del justo, sino el amor al poder y el culto de la in
malas, con otros errores que fueron condenados. Su dividualidad egoista y envidiosa, que todo lo quiere
discípulo David de Dinant enseñó que Dios era la supeditar, elevándose sobre los demas.
materia primera; y su sistema era muy parecido al Tal es el origen de la ambicion que domina á los
de Espinosa: asi se reproducen en un siglo los errores hombres, pasion , funesta, hermana del orgullo, que
ya proscriplos; y como para cabal cumplimiento de los arrastra por diversos caminos en pos de las va
que la iniquidad se engaña á sí misma, todos los es riadas ilusiones que los atraen. Al uno le inspira el
fuerzos de secta y de sistemas temerarios vienen á amor al poder y al mando, al otro le presenia una
¿l TIOS.
en serviles repeticiones de estravagantes de aureola de gloria ciñéndole la frente con un brillo in
moral. Ya es la palma de la elocuencia, ya el lau
rel de las conquistas. A aquel le da una sed insacia—
Ambleion, deseo escesivo de honores. Muchos ble de grandezas, títulos y honores; fortificado con
filósofos de nuestro siglo han hecho la apologia de la la vanidad quiere deslumbrar por la pompa y el lu
ambicion, porque el Evangelio la reprueba y ordena jo: Oras veces corre en pos de la riqueza, y no será
la humildad. Dicen que un hombre es digno de ala feliz sino cuando eclipse las fortunas mas colosales.
banza cuando anhela las dignidades y los puestos im En este siglo de orgullo, en que el hombre hace
portantes, con el designio de ser utilá sus semejantes. lantos esfuerzos para separarse de Dios, y para en
Esto seria muy bueno, si fuera el motivo que les ani contrar en sí mismo los elementos de grandeza, de
mara á los ambiciosos; pero demasiado sabemos por existencia y de duracion, la ambicion es una pasion
esperiencia que su intencion es la de gozar de los muy comun. No quiere comprenderse que es impo—
privilegios anejos á los altos puestos, sin dárseles mu sible la igualdad perfecta entre los hombres. Esta
cho cuidado por cumplir con sus deberes, y ademas igualdad no puede existir sino bajo el punto de vista
que los individuos mas ineptos son comunmente los de las cosas esenciales al ser, pero nunca respecto de
mas ávidos y los que mas se mueven para llegará las que no son mas que contingentes. Todos los miem
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bros de la familia humana son iguales delante de la bajezas no se sometel Adular á los hombres que des
justicia divina, deberian serlo delante de la de la tier precia; incensar la ignorancia de un protector; do—
ra: como seres lo son á los ojos de la moral. Mas los blar la cerviz ante el poder, fomentar las pasiones de
hombres todavia quieren ir mas allá: todos tratan de los que le sirven de escalon; soportar las afrentas;
romper la gerarquia social para su adelanto perso despreciar los disgustos y las humillaciones; hacer en
nal; cada uno cree valer por lo menos tanto como los lodas circunstancias abnegacion de su voluntad pro
que se encumbran en el poder, y tratan de derribar ia; vender su honor y su conciencia, despreciar las
los para ocupar sus puestos. Tal es el secreto y la eyes de la equidad y de la moral. Tal es el papel pe
causa de esas ambiciones devoradoras que ponen tan noso, bajo é infame que representan la ambicion. To
tos antagonismos en evidencia. do lo halla asequible; llega arrastrándose á donde se
El industrialismo, los gobiernos republicanos y la deslizarían los pies caminando de frente. Orgullo
constitucionales fomentarán siempre las ambiciones, sa y abyecta, audaz y servil, siempre desgraciada,
en tanto que los hembres tengan, en mas la persona— se corroe á sí misma el corazon. ¿ en los medios
lidad que la virtud, y quieran adelantar para sí mis que enmplea, es defraudada en sus esperanzas, y no
mos mas bien que para hacer el bien. consigue lo que desea sino á fuerza de acumular agi
A veces la ambicion es hasta cierto punto un re laciones sin número, y disgustos devoradores al re
sultado de organizacion. Los hombres secos y bilio— dedor de una existencia tan frágil y miserable ya por
sos, los melancólicos, aquellos cuyas facultades afec sí misma.
tivas estan poco desarrolladas, tienen en general el Pocos tienen el temple de alma para marchar con
instinto personal muy pronunciado: casi todos son la cabeza erguida á donde les arrastra su ambicion,
envidiosos; con facultades un poco estensas serán am— para separar con mano firme los obstáculos que en—
biciosos. cuentra al paso ó para encontrarle llano y fácil por la
La ambicion es una de las pasiones mas poderosas, superioridad de su genio. Para uno de esos gigantes
domina á todas las demás, aun al amor físico: esto ue de siglo en siglo se ponen á la cabeza del mun
se esplica por su naturaleza. Existe en la inteligen— o , le dirigen ó le trastornan, y suben con las alas
cia, cuyos inmensos deseos jamas pueden salislacer estendidas al templo de la fama, cuántos enanos no
se, al paso que una multitud de pasiones, el amor se deslizan, arrastrándose hasta esas regiones eleva—
físico entre otras, teniendo por objeto las satisfaccio— das que el vulgo mira desde abajo? Esos ambiciosos
nes corporales, son por su naturaleza limitadas y su de último orden son los mas numerosos, y los que
jelas á la saciedad. agitan la sociedad, porque encuentran muchos mas
Le propone sin cesar nuevos goces, y este atracti antagonistas que conbatir. Mientras que los primeros
vo es la causa de su accion. Mas cosa notable siem— entran en los altos designios de Dios, como medios
pre se engañan los ambiciosos cuando consideran á ara regenerar y castigar al mundo; estos últimos son
estos goces como fines de la pasion que los domina; os buitres que eternamente devoran el cuerpo so—
para ellos, los fines, cuando los alcanzan, lo convier cial; establecen para el sitio de sus presas el terreno
ten en medios. La ambicion es insaciable, es un abis de los honores y de los puestos, y separan de las con
mo sin fondo: como el tiempo, devora todo lo que currencias á lodos los alentos y á todas las virtudes,
se le presenta. Tiene de comun con la envidia, que salpicando con lodo al mérito.
mira siempre adelante, jamás atrás ni á los lados. Esas ambiciones miserables producen las agitacio
Un solo hombre que pase adelante le hace olvidar que nes imleslinas que nos acosan sin cesar : ellas son las
ha adelantado á otros mil. que engendran los molines y las conspiraciones, que
Cuando marchamos por el campo, nuestras mira onen en juego la intriga y la mentira para minar las
das se encuentran limitadas en el horizonte por un ortunas y las glorias. A ellas se deben los escánda—
círculo que retrocede á medida que vamos avanzan los de toda especie que deshonran nuestro estado so
co. Los niños creen poder llegar á tocarle, mas los cial. No hableis á nuestros legisladores de esas mo—
hombres juiciosos se rien de su simplicidad. Tal es el destas virtudes romanas que conducian á la gloria
horizonte de los ambiciosos, siempre estienden sus lí por medio del talento y de los méritos; para ellos el
miles huyendo ante sus ojos; y sin embargo tan cie camino es mas corto, llegan al fin haciéndose gefes
gos van que nada puede contener su carrera. de pandilla por sus bajezas. En el dia se tra la menos
El que es arastrado por este vicio no goza de nada, de merecer los votos de sus conciudadanos, que de
porque lo que desea le hace despreciar lo que posee. mendigarlos y comprarlos.
No goza de su gloria, que le parece muy pequeña, Ahora el pueblo es rey, dicen; pobre rey, que las
ni de los honores que le rinden, porque piensa en ambiciones de los grandes empobrecen ó mutilan;
otros mas lisongeros, ni de su poder, porque ve á aplaude la comedia que representan sus señores, y
otros hombres mas poderosos que él. Es desgraciado no gana en este espectáculo, que le dan á sus espen
en la misma felicidad, indigente enmedio de la abun sas, mas que el asociarse como un servil imitador,
dancia. Ahi está Alejandro, dueño del mundo, sentia á sus vergonzosas pasiones. La ambicion desciende
que no hubiera otro universo que conquislar : Ahí desde la cumbre hasta la base de la sociedad; sopla en
Aman, favorito de un gran rey , mas poderoso que las masas su aliento abrasador, todos se lanzan en por
su señor, y desgraciado, porque solo Mardoqueo re de un sueño que creen poder realizar, ninguno se
husa doblegarle la rodilla. considera apto para llenar el papel modeslo, aunque
Dejando á un lado sus engaños y dolos, la ambi útil, á que la Providencia le ha destinado. Adelantos,
cion participa de otras miserias. Qué envilecimiento riquezas, he aqui los clamores de la época; se arries
para llegar al término que se proponel A cuánlas ga todo, naufragan cuerpo y bienes en las empresas
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masinciertas, y la espantosa bancarrota sume con rán mutilados: todas las familias de un imperio der
tinuamente á sus víctimas en la miseria, en las cárce ramarán lágrimas sobre tal calamidad, que se lláma
les y en la desesperacion. una victoria; pero la historia la inscribirá en sus ana
Triste destino del hombre cuando tan solo se con - les , y la fama la estenderá por todo el universo.
creta á las cosas de la tierra, es el juguete de
las en Nada detiene á esos azotes de las naciones, cuando
fermedades de su corazon y de su inteligencia orgu dominan á la victoria; el espíritu del vértigo se apo
llosa. dera de su pensamiento, sueñan con el imperio del
La ambicion busca sus satisfacciones en las cosas, mundo; no terminan una guerra sino para emprender
que varian segun los lugares, los tiempos y las preo otra. Pirro, abandona sus estados para probar fortu
cupaciones. Como todo lo que depende del entendi na contra el poder romano; Alejandro devasta el
miento humano, está sujeta á la versatilidad y reci Asia; á principios del siglo Napoleon reduce á polvo
be la influencia de una multitud de modificadores. bajo su espada á la Europa entera; y no obstante lle—
El salvaje que habita los bosques del Nuevo Mundo ga el dia en que estos torrentes encuentran un obstá—
pone toda su gloria en su vigor y valor; cuantas mas culo al paso; Dios no les permitirá aniquilar al mun—
cabelleras humanas cuelga en su cabaña , tanto mas do: les árma por un momento con su espada, mas se
grande aparece; cuantas mas figuras pintarragea, la rompe cuando se hallan cumplidos sus designios.
ridículas ó groseras á los ojos del arte, tanto mas Estas épocas de gloria cuestan á las naciones mu
digno es de admiracion. El negro del Senegal ambi cha sangre, humillaciones y vergüenza, porque tar—
ciona con tanto anhelo un viejo frac, único vestido de ó temprano los oprimidos se vengan. Los bárbaros
que puede llegar á poseer, como nuestros tribunos la entregan al saqueo á esa Roma que tantas veces los
casaca galoneada de primer ministro. La ambicion sobre tiranizó; el estrangero viene á insultar al emperador
de nuestros antiguos caballeros era la de llevar la es— su columna humillar la frente de la Francia,
pada mas pesada y votar de la silla á los mas valien tanto tiempo orgullosa con su poder. Mas la ambi
tes; la de nuestros hombres de estado, es la de ha cion no ve ese término fatal en la embriaguez de la
cer mas brillantes discursos y conquistar el mayor victoria. Cómo creer que Austerliz y Wagran sean el
camino de Santa Elena?
grado de influencia. -

Pasion insaciable la ambicion anhela la celebri Por qué, pues, atormentan de esta suerte los hom
dad; el poder, los honores y la fortuna á cualquier bres su existencia? No llegarán á convencerse alguna
precio. El crimen no la detiene: para el que ama los vez de que todas esas vanidades de la ambicion no son
fines, dice, todos los medios son buenos. Rómulo nada para la felicidad? No se os presenta todo lo pa—
mala á su hermano para reinar; Soliman comete otro sado, atestiguando los desastres de la ambicion? De
crmen semejante con el mismo objeto; Mahomet in lodos esos nombres engolados en el porvenir por los
sulta la Divinidad para hacerse gefe de religion; Erós. ambiciosos de todos los siglos, cuántos hay que sobre
trales incendia el templo de Efeso para inmortalizar naden? Los mas gloriosos pierden su colorido despues
su memoria; otro malvado asesina á Galeas, duque de algunos años; nuevos acontecimientos ocupan la
de Milan, y al conducirle al suplicio esclama con en— atencion del mundo; y despues de un siglo todo lo
tusiasmo: «Si mi muerte es cruel, mi fama es segu que ha pasado de memorable no existe mas que de
»ra, y la posteridad guardará en su memoria este una n.anera vaga y confusa en la memoria de los
» hecho». hombres.
Esta pasion es la que engendra todos los hereges. La historia no escribe en sus fastos sino los hechos
Ella fue la que derrumbó uno de los genios mas bri mas notables, aquellos que son de lal naturaleza que
llante de nuestra época, ella hizo de una de las co— se lienen en algo para el destino de las naciones. Ól
lumnas mas firmes de la Iglesia católica un conspira vida y rechaza todo lo que no tiene esta importancia.
dor popular, un adulador de los hombres de parti Enlre los compañeros de Cesar se encontraba un
do, un renegado vergonzoso que no sabe como des— gran número dejóvenes romanos que creian llegar á
hechar la memoria de lo pasado que le oprime, y en la inmortalidad siguiendo su fortuna. Qué recuerdo
la cual, haga lo que quiera, se encuentra su genio nos han legado? Los hechos mismos de nuestra his
encadenado. - toria nacional se nos presentan en una lontananza ne
Cuando la ambicion domina á una de esas almas bulosa; y los hombres que se cubrieron de gloria á los
0derosas, ante la cual desaparece el antagonismo, y ojos de sus contemporáneos, los que se colocaron á
a fortuna la franquea el caicino, uno de esos genios la cabeza de los gobiernos y que fueron poderosos por
belicosos que no sueñan mas que en conquistas y en su fortuna y elocuencia, apenas llaman nuestra aten—
el poder, azotes de la humanidad, entonces veis á cion. La yerba crece pronto sobre los sepulcros, y
los hombres correr en pos de la fantasma de la gloria, las estátuas se suceden con rapidez sobre el pedestal
seguir sus devastaciones, precipitarse los unos sobre de la fama. El moho de los tiempos corroe los bron
los otros, como otras tantas bestias feroces, y anegar ces masgloriosos, borra las inscripciones mas brillan
la tierra con arroyos de sangre. Nada encanta mas los tes, y mezcla las cenizas de los héroes con las cenizas
ojos de esos ambiciosos que el espectáculo de un en— del comun.
carnizado combate, en el que un millon de hombres Dó están los monumentos de los Asirios y de los
se degüellan por su causa. Su mirada domina á ese Medos? Cuántas estátuas no levantaron Grecia y Ro
campo de batalla, su voluntad hace mover todas esas mal El vandalismo de las naciones no viene tambien
legiones y tomar los instrumentos de muerte. Al si en apoyo del tiempo destructor? Ha respetado la me
guiente dia el suelo estará cubierto de cadáveres, de moria de los reyes de la Francia que dormian en las
ron cos humanos; millares de desgraciados queda bóvedas de S. Dionisio? No llegará el dia que abata
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el orgullo del Panteon? quién sabe? Nínive no ocu za jamas muere en su corazon. En el caso de un por
pa ya un lugar en la tierra, y el pastor sentado sobre venir incierto, aceptará á no dudarlo, la desgracia,
las ruinas de Esparta, no sabe ni aun decir á los es la prision y la muerte, con tal que pueda satisfacer la
trangeros lo que fueron aquellos restos de columnas sed que le devora. Es una pasion que no se apaga
y trozos de mármoles. Tan solo han pasado algunos con la edad y qne nunca se sacia. El ambicioso no ce
siglos y viageros ilustres preguntando en vano á los de voluntariamente el puesto que ocupa, no descien
ecos y á aquellos despojos sobre las glorias de otro de de esa posicion sino cuando ya no puede engran
tiempo.... Al escuchar su silencio, no les queda mas decerse más, cae sobre sí mismo y se hunde bajo su
recurso que meditar sobre las vanidades humanas. peso. Todos los hombres que han ocupado los altos
Todo es ¿? aqui abajo, y las generacionesdestinos, cuando se les separa de ellos, pierden la sa
de glorias descienden á la tumba como las genera lud rápidamente, si no vuelven á colocarse en otra
ciones de los hombres. De qué sirve hacer al caer esfera de actividad y de ambicion. Los gobiernos que
un poco mas ruido que el vulgo? Esa es la señal que han instituido los títulos honoríficos, las cintas y las
esperan la envidia, la calumnia, y muchas veces la cruces para aquellos que priva de sus empleos y del
verdad, para arrancará la tumba una gloria real ó poder, conocian bien el corazon humano, y sabian
falsa. Jamas borrarán sus esplendores el asesinato de ue es necesario consolar la ambicion con la vani
Clytus, ni ahogarán los gemidos que salen de los fo
sos de Vincennes.
¿. Tanto valdria condenará muerte á los que des
poja de esta suerte, arrinconándolos sin compensa
La ambicion acaso podria arrostrar la muerte y el cion; en todas las edades, el hombre se divierte con
tiempo; mas cómo despreciar los golpes de la fortu los diges.
na y las vicisitudes humanas? El que se sienta sobre La ambicion es una pasion esclusiva; rara vez el
un trono, está seguro de no morir en el destierro, en corazon de aquel á ¿ domina da acogida á otros
las cadenasó sobre el cadaso? Ocupariamos todas impulsos. La naturaleza ha perdido para él su encan—
eslas páginas con los nombres mas brillantes, siqui to; permanece sordo á esa sublime armonía de la
siéramos recordar al lector todas las catástrofes de la creacion, que proporciona unos goces tan puros al
ambicion. Tasso muere la víspera de su triunfo. Te corazon tranquilo que sabe escucharla. Todos esos
místocles es desterrado; Manlio despeñado; Pompe placeres que son la distraccion del trabajo, el encan
yo y Cesar, esos dos rivales que se disputaban el mun to de los ratos ociosos no tienen para él atractivo. Ol
do, mueren asesinados, el primero en las riberas afri vida con la mayor facilidad que es, esposo y padre.
canas, y el segundo en medio del Senado de Roma, No tiene amigos, no considera á los hombres sino co
De setenta y seis miembros que dirigieron la Con mo obstáculos ó medios. No ocupa un asiento en el
vencion francesa, diez y ocho fueron guillotinados, banquete de la familia y de la amistad, ni su pa
tres se suicidaron; ocho fueron deportados; seis en ladar gusta de los manjares. El camino de la am
carcelados; veinte y dos colocados fuera de la ley, y bicion está sembrado de , espinas y abrojos, á la
cuatro atacados de enagenacion mental. Jamas bro manera que cuando el soplo abrasador del desierto
taron tantas ambiciones, y nunca sufrieron tantas der atraviesa la llanura, agosta la yerba, despoja á los
rotas dirigidas por la Providencia. árboles de su verdor, y se ve reinar por do quiera la
Al traves de los mares mas apartados ecsiste una muerte, en donde poco antes la risueña naturaleza
roca olvidada, alejada del mundo, y que parece estar ostentaba sus tesoros.
colocada allí para servir de asilo á la desespera La actividad devoradora que arrastra á la víctima
cion. No ha mucho andaba errante sobre sus bordes, de la ambicion, no le deja tiempo para reposar. Sus
contemplando desde aquella altura el mar, el que vió facultades cerebrales, siempre exaltadas, sobreesci—
el universo á sus pies, y el que atravesaba la Europa tan todo el organismo. La sangre circula con fuerza
arrastando en pos de sí á sus naciones y á sus prín y frecuencia; el corazon es el asiento de palpitacio
cipes. Jamas fueron los hombres testigos de tanta nes violentas; los pulmones respiran con mas rapidez
gloria ni de tanto infortunio. El emperador Napoleon y trabajo; las digestiones se hacen mal: la frente se
guardado sobre este peñasco por insolentes carcele— encuentra surcada con arrugas profundas; las cejas
ros, muriendo lejos de su patria, de su familia, y casi contraidas y aproximadas; los ojos hundidos, lazan
sin amigos, es el egemplo mas grande que nos ha le do miradas secas y penetrantes. Nunca se presenta la
ado la historia. Los monumentos de los hombres se sonrisa en sus labios; y la tez no brilla ya con los
esploman y se esconden bajo sus escombros. Santa matices sonrosados de la salud. Los cabellos blanquean
Elena es un monumento de eterna duracion que pro ó se caen antes de tiempo.
clamará en todos los siglos la impotencia del hombre Mil alteraciones profundas estan en germen en esas
y la grandeza de Dios, sin cuya voluntad nada se cum organizaciones contínuamente azotadas por la fiebre.
ple aqui bajo, y que dice á los conquistadores: «Yo El aneurisma, el cáncer del estómago, las obstruc
vengo áti, ó príncipe soberbio... porque tu hora ha ciones viscerales, acaban ordinariamente los dias
llegado, y he aqui el tiempo en que yo debo visitar— del hombre subyugado por esta pasion.
te...» Jer... c. 50, y. ¿? «Llegó el tiempo en que Muy frecuentemente la inteligencia no puede so
le has precipitado en el abismo: los que te vean se brellevar esta exaltacion; se deprava. En los deli—
aproximarán áti, y dirán al contemplarte: es ese el rios y aberraciones de la locura es en lo que termina
hombre que ha espantado á la tierra y conmovido á su carrera la ambicion. Las casas de dementes se en
los reinos?» Isaias c. 1, y . 15 y 16. cuentran llenas de emperadores, conquistadores, mi
De qué sirve á la ambicion esas grandes lecciones llonarios, papas, santos y hasta de dioses. Los poetas
del infortunio? No piensa en lo pasado, y la esperan y grandes oradores abundan en ellas, En esos sitios,
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Ya no hay trabas para la ambicion, ni el bien pare quisieron igualársele, cómo ha derrumbado á los honr
cer que la limite, ni consideraciones que la conten bres orgullosos de todos los siglos. La religion doma—
gan. Esa estensa llaga aparece en toda su desnudez. rá ese corazon altanero, prosternará esa frente sober
El emperador se envuelve en su púrpura de trapajos, bia delante del que mira de la misma suerte al pobre
y bajo las ridículas insignias en que se halla rebuja que al monarca, al esclavo que al conquislador.
do, toma el continente, el aspectó del poder y de la Curado bien pronto de una vana ambicion, ese
magestad. El conquistador habla de sus victorias; hombre cumplirá con docilidad su destino en las vias
intesantemente va á partir para acabar de someter de la Providencia, hará el bien á los hombres, sin
la Europa: escribe instrucciones á los generales. Es esperar de ellos ninguna recompensa, y disgustado
te que mira al cielo con un lujo escesivo de gestos de las vanidades del mundo, marchará á la conquis
grandiosos, es un Dios que á la menor señal hace vo ta de una inmortalidad que no le será arrebatada,
lar las nubes y dirige el rayo. Aquel, subido sobre un porque no depende del capricho de la fortuna, sino
otero, arenga á una multitud inmensa y domina las de la justicia de Dios. (Des passions dans leurs rap -
masas con la fuerza de su elocuencia. ports avec la religion, la philosophie et la medicine te
Qué espectáculo y que lecciones Ah! ese ambicio gale, par P. Belouino, docteur medecin.)
so tan altivo y vano, que delira con el imperio del
mundo y la gloria, es un pobre loco que se pone á la Ambronlano, rito ú oficio). Manera particu—
crítica del mundo, escitando la risa de los niños y la lar de practicar el oficio en la Iglesia de Milan, la que
piedad de los hombres. tambien se llama algunas veces iglesia ambrosiana.
Ambiciosos, que os elevais insolentemente por ci— Este nombre viene de S. Abrosio, doctor de la Igle
ma de los demas mortales, que soñais grandezas y sia y obismo de Milan, en el siglo cuarto. Walafrid
poder, descendedá esos asilos; venid á instruiros á la Strabon ha pretendido que S. Ambrosio era verda
vista de tantas miserias, aprended á lo que pueden deramente el autor del oficio que se llama tambien
conducir los estravíos del amor propio, y cuál es el en el dia ambrosiano, y que le dispuso de un modo
término de las vanidades humanas! una plaza en el particular, tanto para su iglesia catedral, como para
hospital de locos para las ambiciones sin suceso; pa las demas de su diócesis. Sin embargo, algunos creen
ra las que adopta la fortuna alguna catástrofe sani la iglesia de Milan tenia un oficio diferente del
grientá; la historia está allí para decíroslo e Roma, aun antes de este santo prelado. Efectiva—
Los ausilios de la medicina y de la morai son po— mente, hasta la época de Carlomagno, las iglesias te
co menos que impotentes para curar la ambicion nian cada una su oficio propio; en Roma mismo ha
Esta pasion se hace sorda á los consejos, y conoce di bia una gran diversidad de oficios; y si hemos de creer
ficilmente su mal. El médico prescribirá d ambicioso á Abelardo, solo la Iglesia de Letran conservaba por
un régimen alimenticio sedativo, le alimentará con completo el antiguo oficio romano; mas posteriormen
leches, frutas y legumbres; no le permitirá el uso de te, cuando los papas quisieron hacerle adoptar á to
bebidas alcohólicas. Le aconsejará un ejercicio acti das las iglesias de Occidente, á fin de establecer una
vo: la caza, la pesca y la agricultura le serán útiles. uniformidad en el rito, la Iglesia de Milan se valió del
Tratará de ocupar su entendimiento con el encanto nombre del grande Ambrosio, y de la opinion que se
del estudio, y despertará en el el amor á las bellezas tenia de que habia compuesto ó trabajado este oficio,
de la naturaleza. La tranquilidad de una hermosa para que le esceptuaran lo que hizo que tomara el
campiña y las emociones dulces de la soledad, le ha— nombre de rito ambrosiano, por oposicion al rito ro—
rán olvidar, acaso, la sociedad tumultuosa del mundo. mano. La liturgia ambrosiana, se publicó por Pamé
Nunca podrá curar el ambicioso, en tanto que sea lius en 1560; el Padre Le Brun le ha sacado de dife—
espectador de las luchas de la ambicion. Asi como á rentes misales antiguos, impresos ó manuscritos; ano
un soldado le escita el ruido lejano de un combate, ta con la mayor esactitud en que se diferenciaba del
de la misma suerte sentirá hervir su sangre, y rena de Roma, lo que S. Ambrosio le habia añadido, y lo
cer en él esos deseos impetuosos que le arrastrarán que ecsistia antes de su época. Refiere las tentativas
como antes á su pesar. El médico le deberá aconse— que se han hecho, ya por el papa Adriano I bajo el
jar el trato de algunas personas sábias y contentas de reinado de Carlo-Magno ya por los sucesores de este
Su suerle. ¿ en los siglos siguientes, para introducir en
Sin duda, esa felicidad tranquila de que será tes— a Iglesia de Milan la liturgia romana y el rito grego
tigo, esa vida apacible en el seno de los goces tan ríano, y la residencia constante del clero de Milan.
puros de la amistad y de la familia, calmarán su ím S. Carlos mismo tenia mucho celo por la conserva—
petu ambicioso. cion del rito ambrosiano: este rito subsiste todavia en
Mas la religion es la que está encargada del papel la catedral y en la mayor parte de las iglesias de la
mas util y principal en estas circunstancias. A ella diócesis de Milan. Esplicacion de las ceremonias de la
toca presentar al ambicioso esas altas consideraciones, misa, t. 3, p. 175.
ue hacen entrar al hombre en sí mismo. Le mani
estará la fragilidad humana comparada con la ma Ambroslano. (canto ). Se ha hablado tambien
gestad de Dios; le hará comprender cuán vanas y pe. del canto ambrosiano en los rubricarios, usado tam
Jigrosas son para el porvenir todas esas, preocupa bien en la Iglesia de Milan y en algunas otras: se dis
ciones en que se estrávía; le manifestará la pequeñez tinguia del canto romano en que era mas fuerte y ele
de las cosas terrenas, y la importancia de las del vado, al paso que el primero es mas suave y armo
cielo; le dirá cómo el Señor se burla de los ambicio nioso. V. CANto y GREGoRIANo. S. Agustin atribuye
sos, cómo precipitó á los ángeles soberbios cuando á S. Ambrosio el haber introducido en Occidente el
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canto de los Salmos, á imitacion de las iglesias orien que la sustancia de la Trinidad, que es de una natu
tales; es muy probable que compuso ó revisó la sal raleza simple y sin mezcla. De Abraham, l. 2, c. 8,
modia. August. conf. 9, c. 7. n.58. Pero en este mismo pasage dice que el al
ma humana es indivisible y unida á la Santísima Tri
Ambrosiamos ó Bºnaeumáticos, nombre nidad, que es simple. Por otra parte, profesa formal—
que algunos han dado á los anabaptistas, discípulos mente la inmaterialidad v la inmortalidad del alma
de un cierto Ambrosio que encomiaba sus pretendi en otras muchas obras. In Psalm. 118, serm. 10, n.
das revelaciones divinas, en comparacion de las cua 15, 16, 18; Heacam. lib. 6, c. 7, n. 10, etc.
les despreciaba los libros sagrados de la Escritura. Le Clerc, en sus notas sobre las Confesiones de San
Gautien, de Haer en el siglo diez y seis. Agustin, pretende que la invencion de las reliquias
de S. Gervasio y S. Protasio fue un fraude piadoso de
Ambrosio (S). Doctor de la Iglesia y arzobispo S. Ambrosio, que se sirvió de este espediente para
de Milan, muerto el año 397. La mejor edicion de aumentar su autoridad, reprimir á los arrianos é im
sus obras es la de los benedictinos, en dos volúmenes ¿ la emperatriz Justina que los favorecia. Prue
en folio. Lo que mas honra á S. Ambrosio es el haber a esta sospecha: 1:º porque S. Agustin refiere que
tenido por discípulo á S. Agustin. Las demas accio S. Ambrosio fue instruido por medio de una vision ó
nes suyas pueden verse en el Diccionario histórico; revelacion del lugar en que estaban estas reliquias,
nosotros nos limitaremos á ecsaminar las acusaciones al paso que S. Ambrosio no habla de esta vision al
formuladas contra su doctrina. Se le echa en cara ha— referir este acontecimiento. Epist. 22, lib. 1.2.° San
ber llevado demasiado lejos la estension de la pacien— Ambrosio dice: «Encontramos dos cuerpos de una es
cia cristiana y el mérito de la virginidad y del celi tatura estraordinaria, tales como eran en los tiempos
bato; de haber dicho que antes de Moisés no habia ley antiguos». ¿Quiere hablar de los tiempos heróicos, ó
que prohibiera el adulterio; y haber querido justifi quiere dará entender que los mártires eran mayores
car en los santos personages, de que habla la Escri ue los demas hombres? 3.° Refiere que los posei
tura, acciones que no deben ser alabadas ni recu os, ó mas bien los demonios, atormentados por es -
sadas. tas reliquias, confundieron á los arrianos. ...” Con
Estas acusaciones, tomadas de Daillé y de Barbey efecto, este acontecimiento sirvió para humillar y
rac, ambos protestantes, no valen la pena de ser repe contener á estos hereges. Luego fue una estratagema
tidas por los incrédulos. Los primeros cristianos lle inventada á propósito. Le Cere cree que sucede lo
varon la paciencia hasta el heroismo; todo se nece mismo con todas las demas invenciones de la misma
silaba para convencer á sus perseguidores de la inu especie.
tilidad de los suplicios para esterminar el cristia Son estas suficientes pruebas para acusar de mala
nismo y para demostrar á los paganos la superiori— fé á un personage tan respetable como S. Ambrosio?
dad de las mácsimas del Evangelio sobre la moral Si bubiera hablado de la revelacion que habia tenido,
de sus filósofos. En el dia algunos crílicos temerarios Le Clerc le habria vituperado de haberla forjado por
se atreven á sostener que esta paciencia no fue tan orgullo. No es un prodigio que dos mártires hayan
grande. tenido una estatura alta, tal como nos la pintan los
En los artículos CELIR Ato y VIRGINIDAD probare poetas en los hombres de los tiempos heróicos; no
mos que los Padres no han dicho mas que S. Pablo, iiene nada de ridículo esta observacion de S. Ambro
que esta doctrina es sábia é irreprensible, que no es sio. Se verificaron otros milagros con este motivo,
cierto que derogue la santidad del matrimonio, ni fuera de las curaciones de los poseidos. S. Agustia
que sea perjudicial al bien de la sociedad. cuenta que un ciego recobró la vista, y parece afir
S. Ambrosio tuvo razon al decir que antes de Moi marlo cómo testigo ocular. Para cometer un fraude
sés no habia ley positica que prohibiese el adulterio; era preciso haber tenido un gran número de cómpli
pero con esto no quiso dará entender que estuviera ces, los sepoltureros, los testigos, los de los mila
permitido por la ley natural. gros, todo el clerº de Milan, y aun todos los católi
El comercio de Abraham con Agar no era ni un cos rodeados de los arrianos; ¿podremos creer que
adulterio ni un concubinato, sino una polygamia; y ninguno de estos últimos fuese testigo de todos estos
entonces no estaba reprobada por el derecho natura. hechos? S. Ambrosio se hubiera espuesto á la irri
V. PolyGAMIA. sion de los hereges, al descrédito de la fé católica y
Con mucha impropiedad S. Ambrosio llama adul al resentimiento de la emperatriz Justina; no era tan
terio á este segundo matrimonio de Abraham; pero imprudente para correr tan gran peligro. Era indig
no va muy descaminado al decir que en esto no pecó no de Dios el confirmar por los milagros la fé en la
aquel patriarca. Es evidente, por lo que dice de Fa divinidad del Verbo y el culto de las reliquias, con
raon, de Abraham, lib. 1, c. 2, que jamas pensó en que tra el cual se levantó Vigilancio en aquella misma
el adulterio, propiamente dicho, pudiera estar permiti época? Mas Le Clerc, que no creia ninguno de estos
do, y por mas que diga Barbeyrac, no es una contradic dogmas, quiere acusar mejor á toda la Iglesia católi
cion. Tratado de la moral de los Padres, c. 13, S., 12. ca de supercheria que el desdecirse de sus opiniones.
Por lo tocante á las demas acciones de los patriar Por un efecto de la misma pertinacia, vituperó á San
cas, que los Padres de la Iglesia han escusado, V. PA Agustin el haber fingido los pretendidos milagros
TRIARCA, ABRA HAM, etc. obrados por medio de las reliquias de S. Esteban, y
Otros críticos han acusado á S. Ambrosio de ha— de haber sobornado á los que fueron favorecidos con
ber enseñado que el alma humana es material, por— los milagros. -

que nada está exento de composicion material mas o S". Se atribuye á este Santo Doctor la compo
TOMO l. í7
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sicion del Te-Deum, en union de S. Agustin, su dis— la lengua hebrea, antes que hubiese en el mundo ni
cípulo y su mas ilustre conquista. Se dice que estos cábala ni cabalistas. Deuteron, c. 27, y . 15.
dos santos, en el arrebato de una piedad tierna y su La raiz de la palabra amen es el verbo AMAN, el
blime, pronunciaron alternativamente los versículos cual en la pasiva significa ser verdadero, fiel, cons
de este majestuoso cántico: otros, dicen que es esclu tante, &c. Se ha hecho de él una especie de adver
sivamente de S. Ambrosio, y el nombre de himnus bio afirmativo, que colocado al fin de una frase ó de
ambrosianus que generalmente se le da al Te Deum, una proposicion, significa que se asiente á ella, que
es una prueba de esta opinion. Por otra parte, el to es cierta, que se desea su cumplimiento, &c. Asi en
no y la marcha del cántico parecen favorecer la pri el pasage que acabamos de citar del Deuteronomio,
mera. «Porque, dice un crítico ilustrado, lo que dis Moisés mandaba á los levitas esclamar en alta voz di
ingue este cántico de mil otros, muy respetables sin rigiéndose al pueblo: «Maldito el que corteó funda al
duda, y que con justo título tiene cabida en la litur guna imagen, &c., y el pueblo debia responder amen,
gia, no es solamente la multitud de ideas vastas, es decir, si, que lo sea, yo lo deseo, consiento en ello.
grandes, profundas, y sublimes que componen su Pero al principio de una frase, como se encuentra en
fondo, sino tambien la manera con que está todo dis muchos pasages del nuevo Testamento, significa ver
puesto, ó si se quiere, arrojado con una negligencia daderamente; cuando está repetido dos veces, como
de ingenio infinitamente superior á los esfuerzos del sucede siempre en S. Juan, hace el efecto de un su
arte. Aquel tránsito rápido del cielo á la tierra, y de erlativo; segun el genio de la lengua hebrea y de
la tierra al cielo, y de la tremenda majestad del Eter as dos lenguas de quien es la madre, la caldea y la
no á las miserias y necesidades del hombre; adora siriaca. En este sentido deben entenderse estas pala
cion, terror, amor, esperanza, afectos vivos y tiernos, bras amen, amen, dico vobis. Los evangelistas con
apóstrofes de admiracion y de respeto, de confianza servaron la palabra hebrea amen, en su griego, es
y de gratitud, lenguage animado y en desorden, cai cepto S. Lucas que la espresa algunas veces por Al
das bruscas y desiguales, versos sin metro, número TzPs, verdaderamente, ó vAY, ciertamente.
ni cadencia, todo revela un entusiasmo alimentado en
el fuego de la divinidad, y acredita la manera súbi Amenazas. Segun la observacion de muchos
ta, y por decirlo asi, inspirada, con que nos enseña Padres de la Iglesia, las amenazas que Dios hace á los
una tradicion antigua que fue compuesto aque him pecadores, son un efecto de su bondad; si tuviera
no inimitable por dos grandes lumbreras de la Igle designio de castigarlos, no trataria de alemorizarlos,
sia.... Los protestantes, que han despreciado tantas los abandonaria á una completa seguridad. La justicia
cosas de los católicos, no han juzgado que debian pa de Dios exije, sin duda alguna, que cumpla todas sus
sarse sin esta, conociendo que no podia ser reempla promesas, á menos que los hombres no se hagan in
zada». dignos de ellas por su desobediencia; pero no exije
Daillé, Barbeyrac y Le Clerc se dedicaron á cri ¿ se ejecuten todas sus amenazas; puede per
licar la doctrina de S. Ambrosio, en especial el últi onar y tener misericordia de quien quiera, sin que
mo, que siendo sociniano no pudo perdonar al Santo por esto derogue ninguna de sus perfecciones. En la
Doctor su celo contra los arrianos; llegando hasta ca Sagrada Escritura vemos que Dios se ha inclinado
lificar de engaño lo que refiere el Santo, como testigo muchas veces en favor de los pecadores por las ora
ocular, acerca de los cuerpos de los mártires S. Ger ciones de los justos. ¿Cuántas veces la intercesion de
vasio y Protasio. El solo nombre de este Padre de la Moisés no separó los golpes con que Dios queria cas—
Iglesia, y la venerable idea que produce en el ánimo tigará los israelitas?
da los católicos despues de quince siglos, bastan para Esto es lo que observa S. Gerónimo, Dial. 1, con
refutar las malas é injustas críticas y las impudentes tra Pelag, c.9; in Isaiam c. últ.; in Epist. ad Ephes.
calumnias de sus enemigos. En general, cuantas in— c. 2. S. Agustin, L. de Gestis Pelag. c. 3, n. 9 y 11:
jurias hacen los novadores á los Padres de la Iglesia, contra Julian, l. 3, c. 18. n. 35; contra duas Epist.
no son otra cosa que una prueba decisiva de la opo— Pelag., l. 4, c. 6, n. 16; S. Fulgencio, L. 1, ad Monim.
sicion que hay entre la antigua verdadera creencia c. 7, etc. V. MisERICoRDIA.
y las máximas perniciosas de los sectarios, que, no De aqui no se deduce que no tenemos que temer
udiendo apoyarse en la autoridad de estos respeta el efecto de las amenazas de Dios; con frecuen—
¿ depositarios de la tradicion, no les queda mas cia las egecuta del modo mas terrible; díganlo sino los
recurso que el triste y humillante de denigrarlos. En hombres antidiluvianos, los sodomitas, los egipcios,
semejantes cuestiones conviene no perder de vista la los israelitas idólatras y rebeldes, etc. No cumplió las
mácsima del señor Balmes, que sin embargo de con que hizo á David, al rey Achab, á los Ninivitas, etc.
cretarla su autor al negocio interesante de los Jesui porque se arrepintieron é hicieron penitencia. En es
tas, es de una aplicacion general. «Para formar con las circunstancias, la Escritura dice que Dios se ha
cepto sobre el verdadero origen de ese odio implaca arrepentido del mal que queria hacer á los pecadores.
ble contra los Jesuitas, basta considerar quiénes son Ps. 105, y.45; Jerem. c. 26 y 19, etc., porque su con
sus enemigos principales». ducta es semejante á la de un hombre que se arre
piente de haber amenazado. Dios mismo declara en
Amen, palabra hebrea, usada en la Iglesia al fin otra parte que es incapaz de arrepentimiento y de
de todas las oraciones solemnes, con la que conclu— cambiar de voluntad. V. ANTRoPoPArt A.
yen: significa fiat, asi sea, hágase asi. Los sueños de
los cabalistas ácerca de este término no merecen ocu Amnérica. Algunos incrédulos han dicho que
parnos un momento. La voz amen se encontraba en era imposible el concebir de la manera con que fue
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poblada la América despues del diluvio; de lo que los labios gruesos, poca barba, y el cuello corto. Se
deducen que este azote no fue universal, y que no alimentan de pescados, bestias marinas y de yerba
sumerjió esta parte del mundo. Mas, posteriormente, dulce que preparan como los Kamstchatkadalos.....
por los nuevos descubrimientos que han hecho losna Consideran como adorno particular el agugerearse las
vegantes, se ha visto que desde el nordeste de la Tar mejillas, y ponerse en ellas piedras de diferentes co
taria el paso á la América no es largo ni dificil. La lores ópedazos de marfil. Algunos se ponen en las na
semejanza que se advierte entre los habitantes de es— rices varios lapiceros de pizarra de la lonjitud poco
tos dos continentes acaba de convencernos de que mas ó menos de dos dedos; otros llevan ¿ de
tienen un origen comun, que los americanos septen igual lonjitud bajo el labio inferior; hay quien trae
trionales vinieron de las estremidades orientales del otros semejantes en la frente; los naturales de las is
Asia. M. de Guignes en su historia de los Hunos, de las que están al rededor del cabo de Tchoukolsa, y
muestra que en el siglo V los chinos comercia que tienen comunicacion con los Tchouktchi, tienen
ban con la América, y se han encontrado restos de seguramente el mismo origen que estos pueblos de la
navios chinos y japoneses en las costas de la Califor— América, porque tambien tienen como un adorno el
nia y del mar del Sud. En el siglo X los de Norue— ponerse huesos en la cara».
ga descubrieron la América septentrional, y envia «5.". Los americanos y los Kamtschatkadalos
ron á ella una colonia que fue olvidada en los siglos tienen las mismas facciones».
posteriores; lo que aconteció en aquella época, pudo «6.º Guardan y preparan la yerba dulce del
verificarse en los siglos anteriores. mismo modo, lo que no se ha observado en otra
El autor de los Estudios de la naturaleza, t. 2, p. parte».
621, ha reunido muchas observaciones por las cuales «7." Unos y otros emplean el mismo instrumen
viene á demostrar que la poblacion de la América to de madera para encender el fuego».
meridional se ha verificado por las islas del mar del «8." Sus hachas son de pedernal ó de hueso: lo
Sud; que los habitantes de las estremidades meridio que hace pensar con justa razon á Steller que los ame
nales del Asia han podido, de isla en isla, penetrar ricanos han estado en otra época en coinunicacion
con facilidad en América. Los negros que en corto con los Kamtschalkadalos».
número se encontraron en ella, no son indígenas, fue— «9." Sus vestidos y sombreros tienen la misma
ron transportados allí por casualidad, óde otro modo, forma que los de los Kamtschatkadalos».
desde las costas meridionales del Africa. «10.” Tiñen, asi como los Kamtschatkadalos,
* Un sabio ruso, profesor de la academia de Pe su piel con la corteza de o"mo».
tersburgo, llamado Kracheninnikou, aprovechándose «Todas estas pruebas reunidas demuestran que el
de los conocimientos que habia adquirido por su lar— Kamlschalka ha estado contiguo antiguamente á la
ga permanencia en el Kamtschatka, y de las obser América, y que los americanos que están frente por
vaciones de Steller, que tambien habia permanecido frente del Kamtschatka son una colonia de los Kamts—
allí muchos años, era de opinion que esta península chatkadalos, aun suponiendo que el continente de
del Asia estaba en otro tiempo contigua á la Amé América no haya estado jamás unido al del Asia. Es
rica, de la que se habia separado por algun gran las dos partes del mundó están tan prócsimas, que
temblor de tierra. Lo demostraba del modo siguiente: nadie dejará de convenir en que es mu º que
«1." El continente de A3mérica se estiende des los habitantes del Asia, hayan pasado a América
de el Sud-oeste al Nord-este, casi á igual distancia para establecerse en ella; y esto es tanto mas vero—
por todas partes de las costas del Kamtschatka, y las simil, cuanto que en el corto espacio que separa es—
dos costas parece que están paralelas, principalmen— tos dos continentes, se encuentran bastante número
le desde la punta de los Howrilos hasta el cabo Tchou de islas, que han podido favorecer esta transmi
kolsa». gracion».
«2.º Por la forma que presentan las costas 1, se «Muchas partes de Europa han esperimentado re
conoce que se han separado con violencia, y las islas voluciones seniejantes á la del Kamtschatka. La Sici
ue están en medio constituyen una especie de ca lia fue separada de Italia, la España del Africa, la
ena, como las Maldivias. Los temblores de tierra Gran-Bretaña de Francia, y la isla de Filandia de
son muy frecuentes en el Kamstchatka». Groelandia».
«3.” Una multitud de cabos entran mas aden «Entre las muchas causas que pueden haber con
tro, hasta el espacio de quince leguas. tribuido para poblar el Nuevo-Mundo, se colocan
«..." . Los habitantes de la América, correspon— con razon las tempestades. Es preciso añadir que no
diente á la estremidad oriental del Asia, que está fren solo los navios pueden ser arrojados por los vientos
te á frente del Kamstchatka, se parecen á los Kamts desde las costas del Africa hasta la América, como
chatkadalos. Son gruesos, rechonchos y robustos; acontecióá la flota de Cabral, sino hasta las simples
tienen los hombros anchos; su estatura es mediana, barcas, como refiere la historia de la del Padre Cu—
los cabellos, negros y lacios, los llevan esparcidos; su milla».
cara es chata y atezada, la nariz aplastada sin ser «Encontrándome en 1731 (Historia del Orinoco, l.
muy ancha; tienen los ojos negros como el carbon, 2, c. 31), porel mes de diciembre, en la ciudad de San
José de Curuna, capital del gobierno de la Trinidad
Los leones, los tigres y las demas bestias salvages que los de Barlovento, situada á doce leguas de la emboca—
españoles encontraron en el continente de América, son tambien dura del Orinoco, supe por los habitantes que habia
una prueba de que estaba contiguo al nuestro en la antigüedad;
porque jamas se han hallado estos anímales en ninguna isla se arribado al puerto un batel de Tenerife, cargado de
parada de tierra firme. vino, conducido por cinco ó seis hombres flacos y des
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carnados, los cuales, habiendo hecho provision de pan trabajos, á la sabiduria y al celo puro y caritativo de
y carne para cuatro dias , trataron de pasar desde los que establecieron las misiones en California; en
Tenerife á otra isla de las Canarias. Sorprendidos el Paraguay, en los Moeseas, en los Chiquitas, en el
por una tempestad, se vieron abandonados al furor Brasíl y en el Perú: las calumnias de los protestan
de los vientos y de las olas por muchos dias; de ma tes y de los incrédulos que las han copiado, no ha
nera que consumidos los pocos víveres que llevaban rán que se eche en olvido el elogio que hace de ellas
consigo, tuvieron por único recurso que beber el vi el autor del Espíritu de las leyes, l. , c. 6, Es una
no. A cada paso veian la muerte delante de sus ojos, desgracia que la revolucion acaecida en Europa ha
cuando por una gracia especial del cielo descubrieron ya llamado á sí los misioneros y producido la ruina
la isla de la Trinidad, que está frente al Orinoco; de la mayor parte de aquellos establecimientos que
dando gracias á Dios por este acontecimiento ines hacian tanto honor á la humanidad y á la religion.
perado, arribaron y dieron fondo, en el puerto de Mosheim, aunque luterano, habló de las misiones
España, con grande admiracion de la guarnicion y hechas por los jesuitas en el interior de la América
de los habitantes, que concurrieron de todas partes, con cierta moderacion; hasta llegóá aplaudir el medio
para ser testigos de tal prodigio». que empleaban aquellos misioneros para convertir á
«Que este pasage fuese ocasionado por el acaso, los salvajes. Segun él, nada era más prudente que
mas bien que por voluntad de aquellos pobres isle el empezar por civilizarlos antes de instruirlos, y ha
ños, no necesita mas pruebas que su declaracion, el cerlos hombres antes que cristianos. No obstante tra
estado miserable á que se veian reducidos, y el pa tó de denigrar el motivo que guiaba á los misioneros.
saporte de la aduana de Tenerife, que marcaba su diciendo que aquellos pretendidos, apóstoles tenia,
destino para la isla de Palma ó la de la Gomera, perte menos por objeto la propagacion del cristianismo que
necientes á las Canarias. Bien comprobado este he el deseo de satisfacer su avaricia insaciable y ambi
cho, ¿quién se atreverá á negar que lo que pasa en cion desmesurada; citaba como prueba las sumas con
nuestra época no haya podido acontecer en los siglos siderables de oro que sacaban de las diferentes pro—
pasados, mucho mas, cuando estos hechos se encuen vincias de la América. Hist. ecles., del siglo XVII
iran atestiguados por autores clásicos». sect. 1. S. 19. Pero su traductor, no contento con es—
La cuestion de la poblacion de América no pre ta moderacion, dice que Mosheim no lo sabia todo;
senta ninguna dificultad entre los sabios; cuando los que desde aquella época se ha probado que los je—
incrédulos tratan de renovarla, no dan muchas prue— suitas no tenían otro designio que el de formarse en
bas de erudicion. el Paraguay una soberanía independiente de las cór—
No han dado tampoco muestras de sabiduria, al tes de España y Portugal, para dominar despótica
hablar de las misiones hechas en esta parte del mun mente sobre los indios, á pretesto de religion; que
do, y de los efectos que resultaron de las mismas. En ellos fueron los que armaron los indios, y que los in—
nuestro tiempo se ha pintado á estas misiones con dujeron á sublevarse contra el cambio que estas dos
los colores mas negros; se ha sostenidod tratado de córtes habian hecho entre sí, de una parie de sus co—
probar que el fanatismo ó el celo ciego de la religion lonias; que tal ha sido el origen de la caida de los
fue la verdadera causa de las crueldades que los es— jesuitas en España y Portugal. Cita como prueba una
pañoles egercieron sobre los indios: que fueron de— relacion publicada por la corte de Lisboa en 1758.
gollados de doce á quince millones de americanos Segun él, Montesquieu, el sabio Muratori y otros que
con el crucifijo en la mano, para establecer el cris hicieron la apolojía de estos misioneros, hicieron
lianismo en América. traicion á la verdad, ó estaban mal informados.
Para refutar completamente esta calumnia, es su Para hacer creibles las relaciones publicadas con—
ficiente el establecer un cierto número de hechos in tra la conducta de los misioneros, hubiera sido preci—
contestables, y confesados todos por los escritores so desvanecer muchas dudas, á que dan origen. Las
mismos que la han aventurado. .. proponemos con tanta mas confianza, cuanto que la
• . . . . . . . . . . . . .
a e
mayor parte las hemos encontrado en una obra de un
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• • - º s e
militar, á quien no puede acusársele de prevencion,
Los viageros desinteresados, los militares y los na ya á favor de la religion católica, ya respecto de los
vegantes han hecho justicia en muchas obras á los misioneros y de las misiones. De la América y de los
(1) < S”. La parcial acritud y el poeo criterio con que el aba americanos, por el filosofo Ladouceur, Berlin, 1771.
te Bergier trata á los españoles en varios parrafos de este articu 1.º. Es muy dificil de comprender cómo los jesui
lo, hacen precisa su omision. Basta leer la historia de la conquis tas alemanes tenian valor para dedicarse á las mi—
ta de América, las relaciones de viajes, y las tradiciones del nuevo
mundo desde su civilizacion hasta nuestros dias para conven siones de la América, por el solo atractivo de estable
cerse que a parte de los escesos irremediables que llevan consigo cer en aquella parte una soberanía temporal de que
tamañas empresas, no puede imputarse justamente á los espa
ñoles el vandalismo, barbarie y reinada codicia, que una critica no gozaban, y cuya ventaja cedia en provecho de su
mas mordaz que justa se empeña en a propiarles. En semejantes
grandes empresas es un abuso detestable el reunir los escesos
ordenó de su sociedad en Europa. Porque en último
particulares de algunos hombres para culpar, ecsagerando su nú resultado, no se les acusa de haber sostenido en el
mero y gravedad, a todos los que toman parte en los negocios. De
esta nanera, y con parecida lójica no quedaria en pié ninguno de
Paraguay ó en otra parte un tren de soberanos, el
los triunfos que etermizan la memoria de los reinados, imperios y fausto, la magnificencia, las comodidades de la vida
dinastias. Si en vez de buscar la parte odiosa de la historia á que
se alude, y en lugar del empeño en recargarla con punible acri
y los placeres de una corte europea ó asiática. En
tud, se mirase al espiritu de religion y de humanidad que ºrdia aquel pais eran pastores, cataquistas, padres espiri
en los pechos de tantos celosos misioneros y capitanes esforza
dos como arribaron al nuevo mundo, algo mejor parada quedaria
tuales y temporales de los indios; soportaban todos
la fe histórica, y bastante mas fruto producirian las relaciones los trabajos del ministerio eclesiástico; con mucha
sobre tan colosales sucesos frecuencia se esponian á ser degollados por los nue
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vos salvages que querian amansar. A ninguno se le cias que observaron esta conducta, y qué ventaja les
ha visto volver á Europa para gozar de las recompen reporta un pais desierto, y cuyos habitantes han
sas que la compañía debía concederles en reconoci querido mejor volverá ser salvages que sujetarse á
miento á aquellos de sus miembros que la hacian so— su yugo?
herana en América. Los oficiales de la compañía in ¿ los protestantes y los incrédulos se congratu—
glesa de las Indias, despues de haber egercido á nom len con esta brillante espedicion , no nos admira; es
bre suyo la soberanía á las orillas del Ganges, se han un efecto de su furor anticristiano ; pero al ver que
apresurado á volverá gastar en Inglaterra el fruto ciertos hombres, que afeclan celo por la religion, se
de sus cohechos; no se refiere de un solo jesuila, que regocijan con la destruccion de muchas misiones muy
haya transportado á Alemania ú otra parte la me numerosas, casi se vé uno tentado á preguntarlos si
nor cantidad de esos montones de oro que habian reu creen en Dios.
nido en América para beneficio de su compañía. O á Digámoslo de una vez , y sin rebozo: está demos—
estos misioneros los guiaba un molivo de religion, ó trado evidentemente por los acontecimientos, que las
eran los mayores insensatos que hubo en el mundo. acusaciones formuladas contra los fundadores de es
2." Si su gobierno era tañ absoluto, duro y tirá— tas misiones son puras visiones y calumnias; en la
nico, ¿cómo los salvages, acostumbrados desde pe actualidad se conoce la gran falta que se ha cometi
queños á la independencia, consenlian en soportarle? do por dar oidos á semejantes delaciones; pero el
¿Cómo no desertaban, como los negros cimarrones ¿ hecho, y no puede repararse. V. Jesuitas,
MISIONEs.
desechados de la esclavitud , para volver á los hos—
ques? Los misioneros no tenian á sus órdenes un ejér
cito de europeos, para obiigar á los indios á perma— * Americano. Tres parles del mundo conoci
necer bajo su yugo, aun contra su voluntad. Si por do daban suficiente testimonio de la grandeza de
el contrario aquel gobierno era suave y paternal, no Dios; el descubrimiento de un nuevo mundo debiera
venos qué crimen comelian los misioneros sacando de habernos hecho mas reconocidos al Autor de tan
á los indios del estado salvage para hacerles gustar tas maravillas; sin embargo, desde el principio la
las ventajas de la sociedad civil , y atrayéndolos por América y sus poblaciones fueron el objeto de una
este beneficio al cristianismo. En ninguua parte les multitud de discusiones anticristianas. El estado sal
está prohibido á los predicadores del Evangelio el vage de los naturales de este continente suministró
reunir, cuando pueden, el bien temporal de un pue muchos argumentos contra la Sagrada Escritura y
blo á su salvación eterna. los principales hechos que establece,
3.° Pues que los jesuitas, segun la opinion de sus Se quiso ver en esta poblacion incivilizada hom
acusadores, estuvieron siempre ciegamente sumisos bres de diferente raza que los del primer mundo co
isadheridos á la corte de Roma, no sabemos por qué nocido. No tardaron en concluir que la division del
de Lisboa y de Madrid, descontentas cón estos universo, entre los tres hijos de Noé, no era mas que
misioneros, no elevaron desde luego sus quejas al una fábula, como las de los griegos y la tradi
Papa, para obtener de él una orden terminante que ciones mas ó menos corrompidas de todos los pue
obligase á estos últimos á someter los nuevos pueblos blos paganos. Gracias á la inmensidad de los mares
al dominio de cualquiera de estos dos reyes. No hu— que separan los mundos, se creyó poder demostrar
biera sido esto mucho mas prudente que el poner en hasta la evidencia que habia sido imposible toda co—
pié un ejército, y diseminar el rebaño quitándole sus municacion con las demas partes de la tierra antes de
pastores? Todo el mundo sabe que la memoria publi Cristobal Colon. Desde entonces se trató de estable.
cada en 1758 por la corte de Lisboa era parto del cer este hecho: que los habitantes de la América
marqués de Pombal, el déspota mas absoluto que hu eran de una raza diferente de hombres, que no des—
bo jamás, y cuya memoria es ecsecrable en el dia. cendian de la gran familia cnyo padre era Adan, y
Esta pieza no está suficientemente autorizada para por consecuencia, que la historia del antiguo Testa—
condenar á los acusados si, mas pruebas. mento no merecia ninguna confianza.
.." . Otro enigma que hay que esplicar es la con Por el contrario, los descubrimientos de los sabios
ducta de los misioneros. Armaron los indios para que de América estan todos á favor del cristianismo, y
defendieran su libertad natural, y no recurrieron al tres cosas principales se encuentran probadas en las
mismo espediente para sostenerse en su pretendida so memorias de los que han escrito acerca de este con
beranía; obedecieron sin resistencia á la primera orden tinente.
que les fue comunicada para que abandonasen , las 1." Que el estado en que se encontraban los pue
misiones, y se volvieron á Europa, en donde estaban blos de la América, ¿? se descubrió este conti
seguros de ser maltralados , como en efecto les suce nente, era una civilizacion degenerada, y no un es
dió. Una vez que les suponen tesoros, y el tener ga lado primitivo; aun mas, que no habian sido necesa
nadas las colonias inglesas, calculemos ahora lo que rios sino algunos siglos para llegar al estado en que
hubieran podido hacer! se encontraban despues de haber gozado de la civi
5." Tampoco queremos que nos digan en dónde lizacion.
están en el dia esos montones de oro que los jesuitas 2." Que en épocas mas ó menos anteriores, ha
sacaban de América, qué se han hecho y cómo han bian tenido una civilizacion mas perfecta, viviendo
desaparecido; pero si es cierto, como se asegura, que en aquellas naciones, en el dia desiertas, un pueblo,
los indios, desconsolados al verse privados de sus pas en el cual fueron cultivadas las artes y las ciencias.
tores, se separaron y se volvieron á los bosques, pre 3." Por último, que aquella civilizacionó aquel
guntanos ahora, ¿qué es lo que ganaron las dos poten pueblo procedia del occidente. Los americanos tenian
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un origen comun y un verdadero parentesco con los bien instruido de las intenciones de Moisés, sostuvo
pueblos del Asia que estaban muy prócsimos á su con á les Ammonitas á quienes los hebreos no les han qui
tinente. tado un solo pedazo de tierra, ni tampoco á los Moa
Por lo tanto, queda demostrado que el estado de so— bitas. Jud. cap. 11, y. 15. Cuando Moisés decide que
ciedad y de ¿ es el mas natural y primitivo estos dos pueblos no entrarán jamas en la Iglesia del
del hombre. Señor, no alega su origen, pero sí el haber rehusado
el dejar pasará los israelitas sobre sus fronteras, sa
Amistad. Muchos de nuestros moralistas incré liendo del Egiplo. Deut. cap. 23, y . 3. No habla de
dulos nos han dicho que no ecsiste amistad desinte este origen mas que para dar razon á su pueblo de la
resada; que la amistad no es mas que un cambio; prohibicion que le hace de parte de Dios; y no se
que es imposible amar á cualquiera, á menos que no equivocaba en mirar á los Ammonitas como enemi
se espere alguna recompensa. Sin duda han consul gos irreconciliables, porque lo fueron en efecto. Cuan
lado á su propio corazon; y como se conceptuan in do David los venció y subyugó, ellos habian provo
capaces de un sentimiento de amistad pura deduje cado la guerra por un insullo hecho á sus embajado
ron que acontece lo mismo á todos los hombres. Je res. Il. Reg. 10 y sig. No es justo se acuse á este
sucristo, que conocia mejor que ellos la humanidad, rey de haber tratado á este pueblo con crueldad.
nos ha predicado una moral muy opuesta á la suya. VÉASE l)Av ID.
«Si no amais, dice, mas que á los que os aman, qué
recompensa obtendreis? Los publicanos hacen otro Amor de Dios. Moisés dijo á los judios: «Vos
tanto». Matth, c. 5, y. 6. El mismosepone poregem otros amareis al Señor vuestro Dios con toda vuestra
plo de una amistad perfecta: «Ninguno, dice, puede alma y con todas vuestras fuerzas». Deut. c. 6, y . .
dar testimonio de mayor amor, que el que dá su vida Dios liene misericordia de aquellos le aman y
por sus amigos». Joan. c. 15, y 13. En este caso no guardan sus leyes;, «castiga á los que le aborrecen ó
puede decirse que medie ningun interés. violansus mandamientos». Erod. c. 20, y.5. Sin em
Algunos críticos se quejan de que el Evangelio no bargo, ha habido filósofos bastante mal instruidos pa
recomenda la amistad. Debian atenderá que es un ra afirmar que no habia en las tablas de la antigua
sentinmiento natural que no se manda; en vano pres— ley ningun mandamiento de amar á Dios. Nosotros
cribirian las leyes á un hombre el que tuviera ami convenimos que en general los judios cumplian bas
gos, si no hubiera recibido de la naturaleza las cua tante mal esté precepto; que el motivo de su obedien
lidades propias para hacerse amar de sus semejantes. cia á la ley era mas bien la esperanza de los bienes
Mas el Evangelio nos ordena seguramente todas las temporales que la sincera adhesion á Dios. Esta fal
virtudes capaces de conciliarnos la amistad de aque la fue todavia mas sensible cuando el saduceismo
llos con quienes vivimos: la caridad, la dulzura, la infectó una gran parte de la Nacion. Jesucristo ha
indulgencia, respecto de los defectos de los demas, encerrado toda su moral en el mandamiento de amar
la conmiseracion para con los que padecen, la solici— á Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como á si
tud en hacer bien á todos, el olvido de las injurias y mismo; en estos dos mandamientos, dice, estan con—
aun el amor á los enemigos. Un cristiano, dotado de tenidos toda la ley y los profetas. Math. c. 22, y.37;
todas estas cualidades, podrá no tener amigos? Jesu Marc. c. 12. Luc, c. 10. No nos deja ignorar en qué
cristo adquirió muchos por este medio contándose en consiste el amor de Dios. «Aquel que guarda mis
tre ellos Lázaro y sus hermanas ; S. Juan mereció de mandamientos y los observa, me ama verdaderamen
Jesucristo un singular afecto, por lo que este apostol
te... aquel que no me ama, no los observa». Joan, c.
se llama á sí mismo el discípulo amado de Jesus. Mu 14, y.21 y 2. Nosetrata aquíde los sentimientos afec
chas veces el Salvador llama á sus discípulos sus amituosos, frecuentemente sujetos á la ilusion, sino de
gos. Luc. c. 12, y ... Dijo á sus oyentes: «Grangea obediencia y de fidelidad en cumplir todos nuestros
ros amigos con los bienes perecederos de este mun deberes. Los motivos que nos conducen á amar á
do». c. 16, y. 9. No se ha limitado, pues, á manifes Dios, son su bondad infinita, los beneficios de que
tarnos con sus palabras y egemplo que la amistad es nos ha colmado en el orden de la naturaleza y en el
un sentimiento laudable, sino que nos ha enseñado de la gracia; las promesas ¿ nos hace, la felicidad
á santificarla ¿ á fundarla sobre su verdadera base, eterna que nos prepara, y el amor que tiene por nos
que es la virtud. otros. V. RecoNocimIENTó. No es cierto que Jesucris
Ammon, Ammom itas. Ammon, nacido del te nos haya prohibido el no amar nada mas que á
incesto de Lot con su segunda hija, ha sido el origen Dios; eso seria contradictorio al precepto de amar al
de los Ammonitas, pueblo colocado al Oriente de la prójimo como á nosotros mismos; pero nos prohibe
Palestina. Ciertos críticos han escrito que Moisésin amarotra cosa mas que á el. Math, c. 10, y.37. Quie
ventó este origen odioso de los Ammonitas con el fin re que estemos dispuestos á dejarlo todo cuando sea
de persuadir á su pueblo que él podia sin escrúpulo, necesario para su servicio y, para la salvacion del
apoderarse de su pais. V. Lor. Al contrario Moisés prójimo. Este es el sentido de las palabras. «Si ¿º
declara á los israelitas que Dios, no les dará una sola no viene á mí, y no aborrece á su padre, su madre,
ºleº de terrcno poseído por los Ammonitas, por su esposa, sus hijos, sus hermanos, sus hermanas y su
os Moabitas, ni por los descendientes de Esaú; les propia vida, no puede ser mi discípulo. Luc, cap,
prohibe tocar allí, por ser Dios quien ha colocado es 1, y.26. Este valor era necesario á los apóstoles , y
tos pueblos sobre el suelo que ocupan , como él quie lo es todavia á los hombres apostolicos. ¿Por eso han
re establecer el suyo en el pais de los Cananeos. Deut. cesado de amará su familia? Confiando en Jesucristo,
cap. 2. y.5. y sig. Trescientos años despues, Jephlé, aseguraban á sus parientes la proteccion del mejor ,
 AMO 91 AMS
y del mas poderoso de todos los Señores. Ninguna da hay de escesivo en el cuadro que S. Pablo ha
moral tiende mas directamente á estrechar los víncu trazado de este odioso caracter. «Llegarán, dice,
los de la naturaleza y de la sociedad, que la del hombres amorosos de sí mismos, ambiciosos, alta—
Evangelio. No nos detendremos aqui en discutir si neros, soberbios, violentos, enemigos de su propia
puede haber un amor de Dios puro y desinteresado familia, ingratos y malvados, sin afectos, incapaces
sin relacion á nosotros mismos; bástanos saber que de amistad, calumniadores, disipados, pendencie
nuestro mayor interés para este mundo y para el oiro ros, duros hácia todo el mundo, pérfidos, insolentes,
es amar á Dios; y que un corazon bastante ingrato ºrgullosos, enemigos de Dios y de sus semejantes.»
para no amarle no está dispuesto á amar á sus seme— Tim. c. 3, y. 2. Se podria citar un númeró mayor
jantes. V. CARIDAD. V. ABNEGAcioN, ABoRRECIMIENTo.
- Amor del prójimo. Cuando Jesucristo nos
Amorrheos Pueblo. Cuando Dios promete á
recomienda en el Evangelio amará nuestro prójimo Abraham dará su posteridad el pais de los Cananeos
como á nosotros mismos, esplica muy claramente en le dice: que esta promesa no se cumplirá sino en cua
qué debe consistir este amor. «Hacedá los demas lo trocientos años, porque la iniquidades de los Amor
que querais que hagan con vosotros» Math. c. 7, y. 12. rheos todavia no han llegado al colmo. Gén. c. 15. y.
Luc. c. 6, y .32. No nos manda tener para con todos 16. Dios concedia cuatro siglos de treguas á este pue
los hombres los sentimientos tiernos y afectuosos, que blo perverso para que volviese en sí y desarmarse la
tenemos para nuestos amigos, pero sí acreditarles la justícia divina. Bello egemplo de la paciencia de
benevolencia por los efectos. La dulzura, la compla Dios para con los pecadores! Pueden verse las obser
cencia, la indulgencia, la conmiseracion, los socorros, vaciones del señor Gebelin sobre los Ammonistas
los consejos y los servicios, ved lo que ecsijimos de Moabitas y los Amorrheos. Mundo primitivo, t
nuestros semejantes, y lo que les debemos. Como , p. 21.
entendian bastante mal este mandamiento
de la ley, y no comprendian bajo el nombre de pró Amós, Uno de los doce profetas menores, era
º mas que á los hombres de su nacion, Jesucristo pastor de la villa de Thecue; profetizaba en Bethel
os desengaña por la parábola del Samaritano, que en donde Jeroboám adoraba los becerros de oro: pre
saluda al judió herido, despojado y abandonado. dijo que la familia de este príncipe seria llevada cau
Les enseñaba por este egemplo que debian mirar co tiva si persistia en su idolatría. Amasias sacerdote de
mo prójimo á los hombres mismos que ellos detesta - los becerros de oro, picado de la libertad de Amós, le
ban mas, esto es, á los Samaritanos. Luc. c. 10, y 30. acusó delante de Jeróboám, tratrándole de visionario,
El mandamiento que añade Jesucristo de amará de hombre peligroso, propio para sublevar al pue
nuestros enemigos, en este sentido nada tiene de in lo contra su rey; lo que obligó al profeta á salir de
justo ni de imposible. Son hombres y tienen derecho Bethel despues de haber predicho á Amasias, que su
á todos los deberes de la humanidad. Los antiguos fi muger seria prostituida en medio de Samaria, y que
lósofos miraban la venganza como un derecho natu sus hijos é hijas perecerian al filo de la espada. Por
ral; nuestro divino Maestro la reprime, asegurándo lo demas se ignora la época y el género de su
muerle.
nos que Dios no perdonará nuestras faltas si no las
perdónamos nosostros mismos á aquellos que nos ofen El principal objeto de este Profeta es el afear á los
den. Math. c. 6. y. i 15. Si esta leccion no fuese judios de los dos reinos de Israel y de Judá sus infi
bastante clara, ¿qué podremos oponer al ejemplo de delidades é idolatría, y anunciarles los castigos que
Jesucristo moribundo que pide perdon á su Padre por caerian sobre ellos y sobre los pueblos vecinos; pero
los que le han crucificado? acabó por predecir que los judios serian restableci
dos en su tierra natal, y reparado el trono de Da
Amnor propio. Amor de nosotros mismos. Una vid. c. 9. y 11. Los judios modernos abusan de es
pequeña reflecsion basta para hacernos comprender la profecía, vanagloriándose que un dia Dios los res
el verdadero sentido de las mácsimas del Evangelio tablecera en la Palestina, y alli renovará el reino de
que condenan el amor propio, mandándonos renun David. Basta leer con atencion el testo para ver que
riará nosotros mismos y aborrecernos. Digan lo que el profeta predijo solamente el restablecimiento de
quieran los incrédulos, estas mácsimas no son ab— los judios despues de la cautividad de Babilonia, y
surdas ni imposibles de seguir. El amor propio por que por entonces se cumplió lo que dijo.
poco que se le adule, es necesariamente ciego é in La Biblia hace mención de otro Amós, padre del
jnsto, y encuentra antes ó despues su castigo en sí profela Isaías: se encuentra un tercero en la genealo
mismo. Un hombre que se ama con esceso, que todo gia de nuestro Salvador referida en el Evangelio se
lo refiere á su propió interés, que quiere una pre gun S. Lucas.
ferencia esclusiva, que no sabe hacer justicia á na—
die, se hace enemigo de todos. Cuanto mas sensi Amsdorfianos. Secta de los protestantes del
ble y delicado es mas fácil mortificarle y desazonar— siglo XVI, llamados asi por su gefe Nicolas Ams
le Cuántos hombres célebres se han hecho por eso dorf, discípulo de Lutero, á quien desde luego hizo
desgraciados! Ellos se embriagan con el incienso de ministro de Magdeburgo, y de su propia autoridad
los elogios; pero la menor censura, el mas ligero tiro obispo de Naumburgo. Sus sectarios eran confesio
de sátira basta para enfurecerlos, para turbar su re nistas rígidos, quienes sostenian que no solamente
poso, y para emponzoñar su vida. Si supiesen repri las buenas obras eran inútiles sino tambien perni
mir y moderar el amor propio, serian dichosos. Na ciosas á la salvacion; doctrina tan contraria al buen
 ANU 92 AMU
sentido como á la Escritura que fué reprobada por cosas que por su naturaleza no pueden tener virtud
los otros sectarios de Lulero. V. LUTER ANos. alguna, y se cree sin embargo que procuran la feli
cidad ó apartan de algun peligro; tal es el caso de
Amuleto. Preservativo. Se llaman asi ciertos aquellos que esperan ganar al juego cuando llevan
reedios supersticiosos que se llevan consigo, ó que consigo la cuerda de un ahorcado, etc. Esta confian—
se ligan al cuello para preservarse de alguna enfer za no solamente es un absurdo sino tambien una im
medad ó de algun peligro. piedad porque supone que hay sobre la tierra otro
Para remontarse al origen de este uso, es me poder sobrenatural que el de Dios que puede ha—
nester recordar, que segun la creencia de los paganos, cernos bien ó mal. Se podria escusar este error por
los mágicos, los encantadores, los hechiceros por la debilidad de espíritu de los que caen en él, sino
ciertos encantos, por palabras ó por caracteres po— fuese ordinariamente acompañado de terquedad. Otra
dian enviar enfermedades ú otras desgracias á las es la cuestion de saber si es una supersticion el lle
personas á quienes querian dañar; que por otras pa var consigo las reliquias de los Santos; como una
labras se podia destruir su poder, y hacer inútil su cruz, una imágen, una cosa bendita por las oracio
malicia: que las medallas de pedazos de vitela ó per nes de la Iglesia, como el Agnus Dei, etc... y si se de
gamino marcados con ciertos caractéres eran un re ben poner eslas cosas en la clase de los amuletes co—
medio ó preservativo asegurado contra toda especie mo pretenden los protestantes. Nosotros conveninos
de enfermedad ó accidentes. Luciano en su Philopsáu que si se atribuye á estas cosas una virtud sobrena
des ha hecho burlas mordaces de este absurdo. V. HE tural de preservarnos de accidentes, de muerte re
chizo. Los griegos los nombraban PHyLACTERios, pre pentina, de muerte en el estado del pecado, etc., es
serrativos: los latinos amolimentum ó amoletum del una supersticion. No es del mismo género que la de
verbo amoliri, estorbar, de donde derivamos amu los amuletos, cuyo pretendido poder no debe referir
leto que tiene el mismo sentido Los orientales los se á Dios; es lo que los teólogos llaman á una obser
llamán talisman, y segun la opinion de las árabes, vancia porque se atribuye a cosas santas y respeta
un mágico con su talisman puede hacer prodigios. bles un poder que Dios no les ha concedido.
Algunas veces es una piedra preciosa, una piedra Un cristiano bien instruido no leeesamina asi: sa
sacada del cuerpo de algun animal: sus huesos re be que los Santos no pueden socorrernos mas que
ducidos á polvo, la señal de un planeta ó de una cons por sus súplicas y, su intercesion para con bios, y
telacion, una hoja de pergamino, de plomo ó de esta por eso la Iglesia ha decidido que es útil y laudable
ño sobre la cual están escritas ciertas palabras, una honrarlos é invocarlos. Es pues una señal de invo
figura obscena etc. Sobre este punto los hombres en cacion y de respeto el llevar consigo su imágen ó
todo tiempo y lugar han llevado la debilidad y la sus reliquias, lo mismo que una prueba de alecto y
credulidad á un esceso increible. Los antiguos tenian de respeto hácia una persona el guardar su retrato
sobre todo gran cuidado de colgar un amuleto del ó alguna cosa que le ha pertenecido. No es pues ni
cuello de los niños para servirles de preservativo una vana observancia ni una loca confianza, espe
contra las miradas de los envidiosos; se suponia que rar que en consideracion del respeto y afecto que ma
á esta edad estaban mas sujetos, á los maleficios y nifestamos á un santo, intercederá y pedira por nos
encantos que los adultos, y que la º mirada de Olros. -

un enemigo celoso ó de una vieja podia fascinarlos. Lo mismo se dice de una cruz que no tiene por si
Como este error viene de una adhesion escesiva á misma ninguna virtud, pero es el signo del cristia
la vida y de un temor pueril de todo lo que puede nismo y de nuestra redencion por Jesucristo; llevar
dañarnos, el cristianismo no ha llegado á destruir esta señal con nosotros es un testimonio de nuestra
le universalmente. Desde los primeros siglos, los fé y de nuestra confianza en los méritos del Salva
Concilios y los Padres de la Iglesia prohibieron á los dor. ¿No nos fundamos esperando que en recom
fieles estas prácticas del paganismo pena de ana pensa de estos sentimientos nos concederá sus gra
tema. Representaron que el uso de los amuletos era ciºs? Es una oracion muda de que la Iglesia nos dá
un resto de idolatría, ó de la confianza que tenia en el egemplo; por este signo los primeros cristianos se
los pretendidos genios gobernadores del mundo, una distinguian de los paganos, y hoy nos distingue de
especie de apostasía de la fé cristiana, una falta de los hereges é incrédulos. -

confianza en Dios, una preocupacion tan ridícula co Llevando con nosotros un Agnus Dei ú otra cosa
mo la de los paganos que aguardaban socorro de una bendita por las oraciones de la Iglesia, atestiguamos
estátua muda é insensible. Thiers en su tratado de nuestra confianza en estas mismas oraciones; ¿qué
supersticiones. 1.° part. Lib. 5 c. 1 ha referido con hay en esto de supersticioso? El Agnus Dei es el
este motivo un gran número de pasages de los Pa símbolo de Jesucristo redentor del mundo; es pues
dres sobre esta materia y lor cánones de muchos laudable el respetarle y amarle. Por vanidad se ha -
Concilios. ce ostentacion de las alhajas y piedras preciosas; me
A los médicos toca decidir si los polvos, plantas, jor nos parece el mostrar signos de religion y de pie
¿ químicas encerradas en cajitas y lleva— dad; cuanto mas desprecio acepta la incredulidad
as sobre la carne pueden ó no ser preservativos con hácia estos signos esteriores, lanlo mas debemos nos
tra ciertas enfermedades. Una vana confianza en es otros arrostrar sus locas censuras y sus mordaces
tas clases de remedios no tiene consecuencia alguna absurdos,
contra la religion; y no hay supersticion cuando no se Se nos objetará que es muy dificil hacer compren
le atribuye mas que una virtud natural verdadera der al pueblo el verdadero espíritu de estos usos; el
ó falsa. No es lo mismo cuando se llevan consigo las grado de virtud que debe atribuirles, y la confianza
 ANA 33) ANA

que debe darles, cuando se engaña fácilmente y que otros á Zuinglio, etc.; pero la opinion mas comun es
no deja casi nunca de caer en el esceso y en algunos que debe su origen á Tomas Muncero, de Zwikan,
abusos. En horabuena. Siempre diremos, que si fue ciudad de Misnia, y á Nicolas Storchon Pelargo, de
ra necesario separar todo aquello de que se puede Stolberg, en Sajonia, quienes habian sido discípulos
abusar, deberiamos renunciará toda religion y á toda de Lutero, del cual se separaron en seguida, bajo
ráctica de piedad. Aun cuando los errores del pue— pretesto de que su doctrina no era bastante perfectá;
¿ fuesen inevitables, seria mejor que se pecase de que no habia hecho mas que preparar las vias á la
mas en cosas respetables que en absurdas y detesta— reforma, y que para llegará establecer la verdadera
bles; mejor es que preste su confianza á la cruz que religion de Jesucristo, era menester que la revelacion
á una figura obscena, á la imágen de un santo que al viniese en apoyo de la letra muerta de la Escritura;
signo de una constelacion, á una reliquia que al por consecuencia estos entusiastas se creyeron inspi
miembro de un animal, al poder de los santos que rados, y comunicaron el mismo analismo á sus
al de los demonios. Los que declaman mas alto contra prosélitos.
las supersticiones, están exentos de ellas? El que se Steidan observa que Lutero habia predicado con
burla del poder de los santos, admite las influencias tanta energia en favor de lo que llamaba libertad
de la fortuna; el que se desdeña de tener consigo una evangélica, ¿ los paisanos de Suebia se reunian bajo
reliquia, lleva la cuerda del ahorcado; graves filóso— pretesto de defender la doctrina evangélica y sacudir
fos que no creian en Dios, han creido en la mágia. V. el yugo de la esclavitud. Cometieron grandes desór—
MáGIA. denes: la nobleza, á quien se proponian esterminar,
tomó las armas contra ellos, y esta guerra fue san
Anabaptistas. Secta de hereges que defienden grienta. Lutero les escribió muchas veces para per—
ue no se debe bautizar á los niños antes de la edad suadirles dejasen las armas, mas inutilmente; le ar
¿? la discrecion, ó que á esta edad se les debe reite guyeron con su propia doctrina, sosteniendo que pues
rar el bautismo, porque, segun ellos, estos siños de lo que habian sido declarados libres por la sangre de
ben hallarse en estado de dar razon de su fe para re Jesucristo, era ultrajar demasiado el nombre de cris
cibir válidamente este sacramento. tiano el reputarlos esclavos de la nobleza, y que si
Esta voz está compuesta del griego ANA que signi tomaban las armas lo hacian por orden de Dios. Tales
fica de nuevo, y de BAPryoso ó BApto que significabau eran las consecuencias del fanatismo en que Lutero
tizar, lavar, porque el uso de los anabaptistas es el mismo habia sumido á la Alemania. Creyó remediar
de rebautizará aquellos que han sido bautizados en estos males publicando un libro, en el cual invitaba á
su infancia. En los principios rebautizaban tambien los príncipes á tomar las armas contra estos sedicio
á todos los que abrazaban su secta y que en otra par— sos. El conde de Mansfeld, sostenido por los príncipes
te habian recibido el bautismo. y la nobleza de Alemania, derrotó y ¿ á Mun
Los novacianos, los calafrigas y los donatistas fue cero y á Pfiffer, los cuales fueron ejecutados en Mul—
ron en los primeros siglos los predecesores de los hausen el año 1525; mas la secta solo fue dispersada
nuevos anabaptistas, con los cuales, sin embargo, es y no destruida: Lutero, siguiendo su carácter incons
reciso no confundir á los obispos católicos de Asia y tante, desaprobó, en cierto modo su primer libro por
¿ Africa, quienes, en el siglo tercero, sostuvieron otro, á solicitud de los hombres de su partido, quienes
que el baustismo de los hereges no era válido, y que consideraban dura y aun un poco cruel su primera
era necesario rebautizar á los hereges que volvian al conducta.
seno de la Iglesia. V. REBAUTizANTEs. Sin embargo los anabaptistas se multiplicaron y con
Los valdenses, los albigenses, los petrobusianos, y sideraron bastante fuertes para apoderarse de Muns—
la mayor parte de las sectas que se levantaron en el ter en 1534, y sostener un sitio, bajo las órdenes de
siglo trece, pasan por haber adoptado el mismo error: Juan de Leida, maestro de sastre, y el cual se hizo de
mas no se les ha dado el nombre de anabaptistas; y clarar su rey. Se los desalojó de la ciudad por el
parece ¿ otra parte que no creian fuese muy nece obispo de Münster el 2% de junio de 1535. El pre
sario el haulismo. tendido rey y su confidente Knisperdollin perecieron
Los anabaptistas, propiamente dichos, son una en el cadalso y despues de esta desgracia la secta de
secta de protestantes que apareció por primera vez los anabaptistas no ha osado manifestarse abierta—
mente en Alemania.
hácia el año 1525 en algunas comarcas de Alemania, y
particularmente en Wesalia, en donde cometieron Hácia el mismo tiempo, Calvino escribió contra
horrribles escesos, sobre todo en la ciudad de Munster, ellos un tratado. Como fundaban especialmente su
de donde fueron llamados monasterianos y munsteria doctrina sobre estas palabras de Jesucristo Marc. c.
nos. Enseñaban que el bautismo administrado á los 16, y. 17. «El que creyere y fuere bautizado, se sal
niños era nulo é inválido; que era un crimen pres vará»; y como solo los adultos son capaces de tener
tar juramento y llevar las armas; que un verdadero la fé actual, inferian de esto que solamente ellos son
cristiano no puede ser magistrado; inspiraban aborre los que deben recibir el bautismo, y que no hay pa
cimiento hácia las autoridades y la nobleza; querian sage alguno en el nuevo Testamento en que el bau—
que todos los hombres fuesen libres é independientes, tismo de los niños esté, espresamente mandado: de
prometian una suerte dichosa á los que se uniesen donde deducian, que se debía reiterar á aquellos que
ellos, para esterminar á los impíos, es decir, á los le habian recibido antes de haber llegado á la edad
que se oponian á sus opiniones. - de la razon. Calvino y otros autores, viéndose muy
No se sabe á punto fijo quién fue el primer autor embarazados con este sofisma, recurrieron á la tra
de esta secta: unos atribuyen su origen á Carlostadio; dicion y á la práctica de la primitiva Iglesia. Opu
TOMO I. 18
 ANA 9. ANA
sieron á los anabaptistas á Orígenes, el cual hace aprocsimaba, y llegaban hasta fijar el término.
mencion del bautismo de los niños; el autor de las El sumario de su doctrina era, «que el bautismo
uestiones atribuidas á S. Justino: un concilio celede los niños es una invencion del demonio; que la
brado en Africa, que segun S.Cipriano, mandaba que Iglesia de Jesucristo debe estar esenta ó libre de todo
se bautizasen los niños tan luego como hubiesen na pecado; que todas las cosas deben ser comunes entre
cido; la práctica del mismo santo doctor con refe iodos los fieles; que se debe abolir enteramente la
rencia á éste objeto: los concilios de Autun, de Ma usura, el diezmo y toda especie de tributo; que todo
con, de Gerona, Londres, Viena, etc., y una multitud cristiano tiene derecho para predicar el Evangelio,
de autoridades de Padres, como S. lreneo, S. Geró - que de consiguiente la Iglesia no tiene necesidad de
nimo, S. Ambrosio, S. Agustin, etc. pastores: que los magistrados civiles son absoluta
Asi Calvino y sus secuaces, despues de haber des mente inútiles en el reino de Jesucristo; que Dios
acreditado la tradicion, se vieron obligados á admi continúa revelando su voluntad á ciertas personas es
tirla; mas habian enseñado á sus adversarios á des cogidas, por medio de sueños, visiones, inspiracio
preciarla. Por otra parte Calvino, sosteniendo la vali nes, etc». Mas no podia ecsistir una creencia unifor—
dez y utilidad del bautismo de los niños, contradecia me entre una turba de fanáticos ignorantes, de los
su propio sistema, puesto que segun decia, toda la cuales cada miembro juzgaba tener derecho de creer
virtud de los sacramentos consiste en escilar la é. se inspirado.
Se les opone á los anabaptistas, que los niños son Asi que á medida que se aumentó el número de
juzgados capaces de entrar en el reino de los cielos. anabaptistas, se multiplicaron las sectas entre ellos, y
Mare. c. 9, y. 14; Luc. c. 18, y. 16. El mismo Salva se les dieron diferentes nombres, sacados ó de sus
dor hace que se le aproximen algunos niños y los ben gefes, ó de sus moradas, de sus opiniones particu—
dice. Y en otra parte, c. 3 y 5, asegura S. Juan «que lares, ó de su conducta. Ademas de los nombres de
cualquiera que no sea, bautizado no puede entrar en monasterianos, munsterianos y muncerianos, han
el reino de Dios»; de donde se sigue que se debe ad sido llamados entusiastas, calaristas, silenciosos, ada
ministrar el bautismo á los niños. mistas, georgianos ó davídicos, hutitas, independien
A esto responden los anabaptistas, que los niños tes, melchoristas, nudipedalianos, menonitas, boc
de quienes habla Jesucristo, eran ya adultos, lo que kholdianos, angustinianos, libertinos, derelictianos,
es falso; en S. Mateo y S. Marcos son llamados jóve poligamitas, semperoranos, ambrosianos, clancula
nes niños, PUYDIA, y en S. Lucas, BREFE pequeños ni rios, manifestarios, pacificadores, pastoricidas, san—
ños; el mismo evangelista dice espresamente que fue guinarios, waterlandianos, ctc. Los partidarios de una
ron aprocsimados á Jesucristo; por lo que se infiere de estas sectas pretendieron que para salvarse es ne—
que no se hallaban en estado de ir por sí solos. cesario no saber leer ni escribir, ni aun conocer la
Se saca otra prueba de estas palabras de S. Pablo primeras letras del alfabeto, lo que les hizo ser llamas
á los romanos, c. 5, y, 17. «Si la muerte tuvo poder dos abecedarios ó abecedarianos. Se pretende que Car
para reinar en el mundo por el pecado de un hombre lostadio acabó por abrazar este partido, que renunció
solo, mas justamente reinarán por medio de Jesucris de su título de doctor, se hizo mozo de cordel, y se
to, y tendrán vida espiritual todos los que reciben la nombró hermano Andres. Pero la distincion mas co
abundante gracia del beneficio de su redencion y de mun es la de los anabaptistas rigidos, y anabaptistas
su justicia. De aquí se debe inferir, que asi como por moderados. Estos últimos fueron conocidos bajo los
el pecado de uno solo fueron todos los hombres con nombres de gabrielitas ó hutteritas ó hermanos de
denados á muerte, de la misma suerte, todos han sido Morabia, y finalmente bajo el de menonitas. Hé aquí
justificados, y destinados á la vida de la gracia por la el origen de estos nombres.
justicia de uno solo, que es Jesucristo». (Epístolas de Cuando los anabaptistas fueron derrotados y pros
S. Pablo, traducidas de la vulgata é ilustradas con critos en Alemania, á causa de su conducta sangui
notas sacadas de los santos Padres y espositores sa naria, Gabriel y Huter, dos de sus principales gefes,
grados, por D. Francisco Gimenez, presbítero). se retiraron á Morabia, Reunieron el mayor número
Asi es, si todos se han hecho criminales por de sus partidarios que les fue posible. Huter les dió
uno solo, los niños tambien criminales, é igual— un símbolo y algunas leyes; les enseñó. 1.º que ellos
mentesi todos han sido justificados por uno solo, tam eran la nacion santa que Dios habia escogído para
bien los niños son justificados por él: nadie puede ser hacerla depositaria al verdadero culto: 2 º que to
justificado sin la fé: por consiguiente los niños tienen das las sociedades que no ponen los bienes en comun
la fé necesaria para recibir el bautismo: no precisa son impías, que un cristiano no debe poseer cosa al
mente una fé actual, tal como la que se ecsige á guna en particular: 3.” que los cristianos no deben
los adultos, sino una fe suplida por la de la Iglesia, de reconocer otros magistrados que los pastores eclesiás.
sus padres y madres, de sus padrinos y madrinas. ticos: ...º que Jesucristo no es Dios, sino profeta: 5.º
Esta es la doctrina de S. Agustin, serm. i70, de verb. que casi todas las señales esteriores de religion son
apost. l. 3. de libero arb. c. 23. n. 67. contrarias á la pureza del cristianismo, que debe ec—
A este error capital los anabaptistas han añadido sistir en el corazon: 6.º que todos los que no son re—
otros muchos de los gnósticos y de los antiguos here bautizados son infieles, y que el nuevo bautismo anu—
¿ algunos negaron la divinidad de Jesucristo y su la los matrimonios contraidos anteriormente: 7.º que
escension á los infiernos; otros sostuvieron que las el bautismo no se administra para borrar el pecado
almas de los difuntos dormian hasta el dia del jui original, ni para dar la gracia, sino que es un signo
cio, y que las penas del infierno no eran eternas. por el cual se une un fiel á la Iglesia; 8 º que Jesu
Sus entusiastas profetizaban que el juicio último se cristo no está realmente presente en la Eucaristia;
 ANA 95 ANA
que el sacrificio de la misa, el culto de los santos é magistratura, y solamente se abstienen de ejercer al
imágenes, el purgatorio, & son supersticiones y abu guno de ellos. Como decididos partidarios de la tole
sos; asi las opiniones de los protestantes han sido rancia, mas bien por necesidad que por conviccion,
siempre la base de las de los anabaptistas. toleran entre ellos todas las opiniones que les parece
Huter no conservó entre sus secuaces ninguna otra no atacan á lo esencial del cristianismo: y se conoce,
práctica de religion mas que el bautismo de los adul que segun sus principios, lo que tienen por esencial se
tos; no les hizo celebrar la cena sino dos veces al año; reduce á bien poca cosa.
y los persuadió á poner en comun todos sus bienes, Se dice que en general sus costumbres son dulces
aun á los niños, á fin de que todos fuesen educados y puras; como, sin embargo, muchos se enriquecieron
del mismo modo. Esta república singular formó des por medio de la agricultura y del comercio, se han
de luego una sociedad de escelentes cultivadores, la separado de la moral severa de sus mayores, y no
boriosos, sóbrios, pacíficos, y muy arreglados en sus escrupulizan en gozar las comodidades de la vida.
costumbres; mas la discordia, la corrupcion y la ir— Existen en muchas partes de la Alemania, hay un
religion no tardaron mucho tiempo en introducirse gran número en Holanda, y muchos en Inglaterra y
entre ellos. Huter y Gabriel no pudieron permanecer en los Estados-Unidos, donde son llamados baptistas.
de acuerdo largo tiempo; el primero no cesaba de di Aunque su doctrina se asemeja mucho á la de los
rigir invectivas contra los magistrados y contra to— cuákueros, sin embargo, no fraiernizan cuando se ha
da especie de autoridad; el segundo, mas moderado, llan unidos.
queria ¿ se conformase con las leyes del pais en Mosheim, que escribió la historia de los anabaptis
que se hallaba. Asi que, se formaron dos partidos, el tas y de los menonitas, hizo todo lo posible por obs
uno de gabrielitas, y el otro de hutteritas, los cuales curecer el origen de esta secta; no quiso confesar
se escomulgaron mútuamente. Despues de la muerte ¿? sus dos primeros fundadores eran dos discípulos
de Huter, que fue castigado con el último suplicio, e Lutero, y se avergonzó, sin duda, de esta poste
como herege sedicioso, las dos sectas se reunieron ba— ridad del luteranismo. Hist. ecles. del siglo 16. sec.3,
jo el gobierno ó direccion de Gabriel; mas este no 2." part. c. 3. Mas cómo se ha de desconocer una
pudo restablecer el órden ni la regularidad de cos genealogía tan clara? Lutero fue el que abrió el ca—
tumbres, y se hizo odioso á toda la secta que le hizo mino á Muncero y á Storch, con su libro de la liber—
arrojar de la Morabia. Retirado á Polonia, acabó su lad cristiana, con sus declamaciones fogosas contra
vida en la miseria. Despues de la muerte de estos dos los pastores de la Iglesia, contra las potestades secu
hombres los hermanos de Morabia se dispersaron, y lares que los sostenian , contra la autoridad y las
la mayor parte se reunió á los socinianos, quienes tu rentas del clero; con el principio que estableció de
vieron con corta diferencia la misma creencia. Catrou ue la sola regla de nuestra fé es el testo de la sagra
Hist. de los anabaptistas. a Escritura, entendido segun el sentido de cada
Hácia el año 1536, Menno Simon , ó Simon particular, y que Dios concede á todos la gracia ó la
Menno, sacerdote apóstata, natural de la Frisia, ensa inspiracion necesaria para su buena inteligencia. Con
yó hacer en Holanda lo que Gabriel y Huter habian semejantes armas podria contenerse el fanatismo por
hecho en Morabia, y se propuso reunir las diferentes algunas de las barreras que se le quisiera oponer?
sectas de anabaptistas. Por sus predicaciones, por sus Mosheim no disimula ninguno de los escesos ni crí
escritos y viages contínuos, alcanzó su objeto, al me menes que se permitieron los gefes de los anabaptis
nos hasta cierto punto, y les inspiró ciertos senti tas de Wesfalia, y confiesa que no se podia dispensar
mientos mas moderados que los de sus gefes anterio el emplear contra ellos las armas y los suplicios: la
res. Los hizo comprender la necesidad de escluir de buena fé parecia exigir que reconociese tambien la
su doctrina, no solamente lodas las máximas licen primera causa de toda la sangre que se derramó. Era
ciosas que muchos de ellos habian enseñado relativas demasiado inútil el remontarse hasta los valdenses,
al divorcio y á la poligamia, sino tambien todas las petrobrusianos, wicleitas y á los husitas, para des
que tendian á destruir el gobierno civil, y á pertur— cender hasta los anabaptistas; su verdaderó padre es
bar el órden público, y las pretendidas inspiraciones Lutero; no se ha podido menos de conocer en ellos
qne hacian ridícula su secta. Si conservó el fondo de su obra, y en vano procuró estinguir un fuego que él
sus doctrinas, halló por lo menos el secreto de pro mismo habia encendido.
poner sus opiniones, bajo unas espresiones menos Mosheim no parece tener muy buena opinion de los
irritantes. menonitas, aun tales como son en el dia; pretende
Por consecuencia, se pretende que la creencia ac que en sus diferentes confesiones de fé, los artículos
tual de los menonitas se reduce á los puntos siguien que se refieren á la autoridad de los magistrados y
tes: No administran el bautismo á los niños, sino so al órden de la sociedad civil, estan propuestos con
lamente á los adultos capaces de dar razon de su fé; so mayor destreza que sinceridad, bajo unos términos
bre la Eucaristia, han abrazado la opinion de los cal capciosos que hacen desaparecer lo que estos artícu
vinistas; respecto á la gracia y á la predestinacion, no los pueden tener de picante ú ofensivo: estas confe
siguen las opiniones rígidas de Calvino, sino mas siones, segun él, son mas bien unas apologías que de
bien las de Melanchton y Arminio, que se aproximan claraciones ingénuas de lo que cada uno debe creer.
al pelagianismo. Se abstienen del juramento, y sostie Ibid. S. 12 y 13. Sin embargo, observa que los meno
nen su simple palabra ante los mágistrados. Conside nitas esponen la mayor parte de los artículos de su
ran la guerra y la profesion de las armas como ilíci creencia en los propios términos de la Escritura san
tas; mas contribuyen con sus bienes á la defensa de su ta. Cómo puede esta Escritura, siendo tan clara, se
patria. No condenan absolutamente los empleos de la gun el juicio de los protestantes, suministrar á todos
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 ANA 96 ANA

los hereges términos capciosos para disfrazar y disi Annaeoreta, hermitaño ó solitario, hombre reti
mular la verdadera fé? Hé aqui una cosa que no rado del mundo por un motivo religioso, que vive
concebimos. solo, con el fin de no ocuparse en otra cosa sino acer
Ocúrrense ºtras muchas observaciones sobre el ca de Dios y de su salvacion. Este término está to
embarazo en que se encuentran los protestantes mado del griego ABAJonEvN, que significa retirarse, lo
cuando tienen que tratar con las diferentes sectas mismo que ermitaño es derivado de la voz griega ERr
que han salido de su seno. Mos, que significa soledad, sitio, desierto. En el princi
Los incrédulos que ensalzaron la dulzura, la regu pió se dió tambien á los solitarios el nombre de mon
laridad y la sencillez de las costumbres actuales de ges, tomado de la voz griega MONos que significa solo,
los menonitas, con el objeto de hacer odiosos los ri aislado.
gores que se emplearon contra sus padres en Wesfa Este género de vida fue conocido siempre en el
lia , y los edictos sangrientos que Cárlos V hizo Oriente. S. Pablo, Heb. c. 11, y. 38, dice que los
ublicar contra ellos, manifestarón muy poca buena rofetas han andado errantes por los desiertos y so
é en sus declamaciones. Qué tenian de comun las e las montañas, y que vivieron en las cuevas y ca
costumbres y la conducta de los anabaptistas sedicio vernas de la tierra. S. Juan Bautista, desde su infan
sos y sanguinarios, con las de los menonitas, tales cia, se retiró al desierto donde vivió hasta la edad
como se nos pintan al presente? Los edictos fueron de treinta años; el mismo Jesucristo elogia su vida
publicados, y se verificaron las egecuciones inme— austera y sus virtudes, Mat. c. 11, y. 7. Mas San
diatamente despues de los estragos que los primeros Pablo de Tebas, en Egipto, es considerado como el
habian cometido á mano armada en Munster y la primer ermitaño ó anacoreta del cristianismo. Se re
Wesfalia. Si sus descendientes les imitaban, mére— tiró al desierto de la Tebaida el año 250, durante la
cian ser tratados del mismo modo. Fue preciso em— persecucion de Decio y Valeriano; bien pronto fue se
plear todos estos rigores para que cesase el fanatis guido su ejemplo por S. Antonio y otros que quisie
mo destructor de aquella secta tan animada en ron observar el mismo género de vida. Muchos se
aquella época. Si hubo algo de odioso en este pro— reunieron despues para vivir en comun, y fueron lla
cedimiento. debió recaer todo sobre los primeros au. mados cenobitas. Este ejemplo fué seguido aun por
tores del mal. Los anabaptistas habian egercido su las mugeres: algunas de ellas se internaron en los de
furor, no solamente en Alemania sino tambien en siertos para hacer penitencia y evitar los peligros del
Suiza, en Flandes y en la Holanda: los protestantes siglo, otras se encerraron en unos claustros para vi
se encruelecieron contra ellos con tanta violencia vir reunidas bajo una misma regla. Tal fué el origen
por lo menos como los católicos, y no fueron tolera del estado m¿ V. MoNGE, CENobITA, RELIGlo
dos hasta que se mostraron pacíficos. s0, etc.
Si hemos de creer á Mosheim, es absolutamente Sobre el fin del cuarto siglo la vida eremítica pa
necesario qae la tolerancia sea el espíritu general de só del Egipto á talia, y despues á las Galias, don
los menonitas, ó anabaptistas modernos. En Ingla— de vivieron anacoretas y cenobitas. La irrupcion
terra, bajo el reinado de Cromwel, tuvieron algunos de los bárbaros, acaecida al principio del quinto si
gefes que eran nada menos que moderados; aun al ºcontribuyó á multiplicarlos por libertarse de to
resente se dividen en dos sectas principales, á saber: a clase de vejaciones, y un gran número de hombres
a de los anabaptistas groseros ó moderados, los cua— se retiraron á ciertos parages desiertos; muchos
les, propiamente hablando, no tienen creencia algu— guerreros, atormentados por remordimientos y por el
na fija, y no escrupulizan fraternizar con los socinia temorde volverá caer en nuevos desórdenes, marcha
nos; y la de los anabaptistas rígidos ó menonitas, pro ron á espiar sus crímenes en la soledad, siendo ad
piamente dichos, que hacen profesion de conservar mirables su valor y su virtud. Las mismas causas que
la doctrina de Menno, y no separarse de ella en na contribuian á aumentar el número de monasterios,
da. Estos últimos emplean la escomunion mas rigu sirvieron tambien para multiplicar los ermitaños ó
rosa, no solo contra todos los pecadores públicos, sino anacoretas, habiéndose conservado el gusto á este gé
tambien contra todos los que se apartan de la senci nero de vida hasta nuestros dias; de aqui el gran
llez de modales de sus antepasados, y hacen profe— número de ermitas que se ven de un estremo á otro
sion de despreciar las ciencias humanas, &c. No se del reino. Mas los superiores eclesiásticos reconocie
puede llevar mas lejos la intolerancia, pues que entre ron mucho tiempo habia, que era mejor el reunir
ellos un escomulgado no puede ya esperar ninguna muchos ermitaños, que no el dejarlos vivir absoluta
señal de afecto, ni ausilio alguno de su esposa, de sus mente solos.
hijos, ni de sus parientes mas cercanos. Conviene sa Este género de vida singular no podia dejar de
ber que los socinianos arrojados de Polonia, se apro— escitar la bilis de los enemigos de la religion, por cu
vecharon de la tolerancia concedida á los menonitas yo motivo se afeó con tanta acritud por los protestan
en Holanda, para introducirse allí y establecerse ba— tes como por los incrédulos. Fue censurado su ori
jo este nombre. Asi que la mayor parte de los hom gen, sus causas y prácticas, y exageraron los incon
res instruidos que tomaban en Holanda ó en otras venientes y las perniciosas consecuencias que acar
partes el nombre de menonitas, fueron unos verdade. reaba este género de vida. Le Clerc, Mosheim, Bru
ros socinianos, y esta es la causa por la que se hizo ker y la turba de protestantes declamaron á porfia
tan numerosa esta secta, y lo que la grangeó la pro sobre esle objeto, encareciendo tambien nuestros fi
teccion de nuestros incrédulos modernos. Mosheim, lósofos rutineros sus invectivas.
hist. ecles. del siglo VII sect. 2, 2.° part. c. 3, Hist. Unos digeron que el gusto por la vida solitaria era
del socinianismo, 1.° part. c. 18 y sig. en el Oriente, y sobre todo en Egipto, un vicio del
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clima, un efecto de la melancolía y pereza que el ca concluyen que no se ha hecho la moral evangélica
lor inspira; otros juzgaron que se aumentó este gusto sino para los monges, En efecto, «S. Antonio, dice
entre los cristianos en virtud de las nociones de la fi—
M. Fleury. S. Hilarion, S. Pacomio y los demas que
losofia de Pitágoras y de Plalon, segun las cuales se los , imitaron no pretendieron introducir una nove
creia que cuanto mas se separaba el alma del cuerpo dad, ó ensalzar la virtud de sus padres; solo quisie
y de los sentidos, tanto mas se aproximaba á Dios. ron conservar la tradicion de la práctica esacta del
Algunos de estos pretendieron adivinar que, en los Evangelio que veian relajarse de dia en dia. Se pro
primeros siglos del cristianismo, se renunciaba al ponan siempre por modelos á los ascetas ó á los cris
mundo, porque se creia que se iba á concluir. Casi tianos fervorosos que les habian precedido.» Cos
todos decidieron que el aprecio por la vida austera, tumbres de los cristianos. S. 32. El mismo Bingham,
nació de una nocion falsa y absurda de la Divinidad, aunque protestante, confiesa que á escepcion de la
Los cristianos, dijeron estos filósofos, se han persua soledad absoluta, la vida de los ascetas era la misma
dido de que Dios, no contento con exigir la sangre de que la de los anacoretas y monges. Orig. eccles., l. 7,
su hijo para aplacar su justicia, se complacia tambien c. 1. V. AscETAs.
en los tormentos de sus criaturas. Suplicamos á los protestantes que traten de justifi
Todas eslas reflexiones solo carecen de buen senti car como es debido, contra la crítica de los incrédulos
do. Si todos estos sábios disertadores hubieran pasa á los primeros cristianos formados por la enseñanza de
do la mayor parte de su vida en el campo y lejos del Jesucristo y de los apóstoles, y cuánto aleguen sobre
tumulto de las poblaciones, habrian esperimentado este asunto nos servirá igualmente para hacer la apo
por sí mismos que se adquiere muy fácilmente el gus logía de los solitarios que renunciaron al mundo. Mas
to de la soledad absoluta, sin pensar en el fin del nada de esto harán; poco les importa entregar el cris
mundo, sin conocer la filosofia de Pitágoras, y sin le tianismo al desprecio de los incrédulos con tal que sa
ner nociones absurdas de la Divinidad. Una prueba tisfagan su propio odio contra la Iglesia romana.
de que esta inclinacion no proviene del clima, es que No se sabe qué pensar, cuando se leen sus lamen
ha sido por lo menos tan comun y tan viva en las re taciones sobre la multitud de errores que hizo nacer
giones del Norte como en las del Mediodía. Pero li en la Iglesia la filosofia de Pitágoras y la de Platon.
mitémonos á ciertas consideraciones religiosas. De aqui ha nacido, dicen, esta loca idea de que se
Desde luego es enojoso que los protestantes hayan podia observar una vida mas santa que la de Jesu
condenado con tanta altanería un género de vida que cristo y la de los apóstoles y practicar virtudes mas
Jesucristo se dignó alabar en su santo precursor, y erfectas que las que estan ¿ en el Evange
que S. Pablo propuso por modelo en los profetas. Di io; de aqui el aprecio insensato por las austeridades
remos de unos y otros lo que Mosheim ha osado de corporales, por la abstinencia y el ayuno, por el ce
libato y la virginidad; de aquila condenacion de las
cir de S. Pablo, primer ermitaño, esto es, que retira
do en el desierto, observó una vida mas digna de un segundas nupcias, el desprecio hácia el estado del
bruto que de un hombre? Hist. eccle, del III siglo, matrimonio, etc. Bruker, Hist. philos., t. 3, p.363.
2.” p., c. 3, S. 3. O pensaremos que Elías, los de No parece sino que se oye hablar á unos deistas ó
mas profetas y S. Juan Bautista habian bebido el epicúreos. Al hablar de estos diferentes artículos de
gusto de la soledad en los escritos de Pitágoras ó de la disciplina cristiana, les haremos ver que todos
Platon, é bien por el temor del fin del mundo, etc? ellos están fundados en la sagrada Escritura, en las
Véase cómo respetan los protestantes la sagrada Es lecciones formales de Jesucristo y de los apóstoles,
critura. y los pondremos á cubierto de su loca censura. Ya
En segundo lugar, los desafiamos á que hagan con se deduce de aqui que los platónicos y pitagóricos,
tra los solitarios reprension alguna que no haya si que tomaron en consideracion todas estas prácticas,
do hecha á los primeros cristianos por los paganos. fueron mas razonables que los protestantes y los in
Vemos por el Apologético de Tertuliano, que estos crédulos modernos.
últimos llamaban á los cristianos insensatos, hom Añadamos á esto que la vida de los solitarios de
bres inútiles para el mundo, misántropos ó enemigos la Tebaida, que nos parece tan terrible, era con cor
del género humano, ridiculizando su aire austero y ta diferencia la misma que la de los pobres y la del
penitente, su inclinacion á la soledad y la sociedad pueblo en Egipto. Segun refieren los viageros, el úni
particular que formaban entre sí, etc. No parece sino co vestido que usan los dos secsos es una camisa ó
que los proleslantes al salirizar á los monges y ana un pedazo de lienzo, y la gente joven, hasta la edad
coretas no han hecho mas que copiar todos estos sar de quince ó diez y seis años, está absolutamente des
CdSI)0S, nuda. Todos se acuestan sobre el suelo, en la calle, ó
Tampoco han dejado los incrédulos de dirigir con sobre los tejados de las casas, y con dos puñados de
tra el cristianismo la censura que hicieron los pro arroz puede vivir un hombre por espacio de veinte y
testantes de la vida monástica ó eremítica. Dicen cuatro horas, sin tener necesidad de mas alimento.
que las máximas del Evangelio conducen á separar Lo mismo acontece en las indias; y tal fue siempre la
al hombre de la sociedad con sus semejantes, y á de— vida de los bracmanes ó filósofos de aquel pais. Mas
sasirlo absolutamente del mundo; que esta era ya la algunos epicúreos septentrionales se espantan de este
moral de los esenios y terapeutas, y que Jesucristo género de vida; corrompidos por un lujo desordena
habia bebido su doctrina entre ellos. Sostienen que do, consideran la austeridad como un suicidio lento y
los primeros cristianos fueron unos verdaderos mon como una locura; se enfurecen contra los anacoretas,
ges, puesto que S. Antonio no pretendió hacer mas porque estos últimos eran mas robustos y mas sólorios
que seguir el Evangelio al pié de la letra; de donde que ellos.
 ANA 98 ANA
Oigamos, sin embargo, sus declamaciones. Si San ciedad con el peso y el enojo de su ociosidad.
Pablo, dicen, y S. Pacomio tuvieron á hien renun Tampoco es cierto que los solitarios son inútiles al
ciar al mundo y retirarse á los desiertos, todo hom mundo. En los tiempos de calamidad, de devastacion
bre que haga io que ellos será igualmente laudable; ó de contagio, cuando la religion se ha hallado en
será, pues, preciso romper toda sociedad con nuestros peligro, cuando los pueblos han necesitado de ausi
semejantes, y vivir como los animales salvages, pa— lios espirituales, cuando el clero secular ha estado
ra ser perfectos cristianos. Desde el punto en que reducido poco menos que á la nada, se ha visto á los
Dios crió al hombre para la sociedad, es un absurdo solitarios abandonar su retiro, acudir al socorro de
el imaginar un estado mas santo y mas respetable sus hermanos, egercer la caridad de un modo herói
que el estado social, ó unos deberes mas sagrados co, y los reyes han ido frecuentemente á buscarlos al
que los de la sangre y los de la naturaleza. Aislarse desierto para confiarles los negocios mas importan
del mundo y separarse de la sociedad, es en el fondo tes. Los de la Tebaida trabajaban, no solamente para
renunciar, á la humanidad y sustraerse al orden ge procurarse la subsistencia, sino tambien para socor
neral de la Providencia, y hacerse inútil para los rer á los pobres con el precio de su trabajo. Por otra
demas; esta es una estravagancia y un atentado pu parte, cuanto mas viciosos son los hombres, cuanto
nible; solo puede provenir de un fondo de misantro mas corrompidas estan las costumbres públicas, tan—
pía, de pereza ó de vanidad: el canonizar semejan to mas úlil y necesario es el darles ejemplos de fru
te desvarío y erigirle en virtud, es un rasgo de de galidad, de desinterés, de mortificacion, de paciencia,
II)0)Cld. de piedad, de sumision á Dios y de desprecio hácia
Respuesta. Si los anacoretas, al buscar la soledad, las cosas de este mundo. Dígase lo que se quiera so
hubiesen fallado á los deberes de la sangre y de la bre el particular, los solitarios han hecho cuanto
naturaleza, violado los pactos de hombre y ciudada acabamos de describir en todos tiempos, y si los pue
no, y resistido al orden de la Providencia, confesamos blos los han respetado ha sido á causa de sus méritos
que no hubieran sido ni santos ni laudables. Mas lo y virtudes.
que deben probar tus detractores es: 1.º que los ana. Un hombre fatigado del tumulto de la sociedad,
coretas abandonaron á sus parientes y su familia en exasperado por los vicios de sus semejantes, y dis
unas circunstancias en que podian tener necesidad gnstado de los objetos que escitan las pasiones, no
de sus ausilios; 2." que no habian recibido de la na— tiene derecho para ir ¿ en la soledad la paz,
turaleza una inclinacion decidida por el retiro, por el reposo, la inocencia, la libertad d la calma de la
la oracion y para una clase de trabajo á que podian conciencia? El que huye del peligro de la corrupcion,
dedicarse sólos: 3.º que no existia ningun peligro pa el que se ocupa en orar, en meditar y trabajar; el
ra ellos permaneciendo en el mundo; ...º que no pres que se acostumbra á cercenar á la naturaleza todo
taban utilidad alguna á sus semejantes. Por el con— aquello de que puede abstenerse no es laudable? Es
trario, sostenemos que no faltaron ni á la naturaleza le hombre da á los demas una gran leccion, á saber,
que les inclinaba al género de vida que abrazaron, ni que se pueden hallar en Dios un reposo, consuelos,
á sus parientes, quienes podian pasarse sin ellos, ni y una felicidad que el mundo no puede dar.
á sus concindadanos, á los que su retiro no causaba
perjuicio alguno, ni á los empleos públicos para cu Anagogia, A amagógico. V. EscRITURA sA
yo desempeño no se reconocian dispuestos, ni á la voz GRADA. S. 3.
de Dios, pues que al contrario creian obedecerle. An
tes de inferir que todo hombre obrará bien en imitar Auna lisis de la fé. V. FÉ.
los, es preciso saber si todo hombre se halla en igual
dad de circunstancias que ellos. Aun amelecla. V. SAMARITANo.
Mas si todo hombre tomase este partido, ¿qué sería
de la sociedad? Loca suposicion. Ya lo ha dispuesto Ananias y Safira. Estos dos esposos fueron
Dios por medio de su Providencia; y de tal modo ha heridos de muerte en virtud de la palabra de San Pe
variado los gustos, los caracteres, los talentos y las dro, por haber mentido contra el Espíritu Santo. Act.
necesidades de los hombres, que es imposible que c. 5, y 3. Los censores de la revelacion no han dejado
tcdos abracen el mismo estado de vida desde el mo de observar que una simple mentira no era un crimen
mento en que los dejó árbitros para escoger lo que mas bastante grave para merecer la pena de muerte; que
les agradase. Esta es la razou por qué todas las con— S. Pedro obró en esta ocasion con una crueldad poco
diciones se hallan con corta diferencia compensadas, digna de un apóstol. .
sin que ninguna se haya quedado vacante: la eleccion Si esta observacion fuera justa, seria preciso atri
que hacen los solitarios, lejos de incomodar á los de buírsela al mismo Dios: la palabra de S. Pedro no
mas, les deja sitio desocupado. tuvo por sí misma la virtud de hacer morir súbita
No es por consiguiente cierto que procedan con mente á estas dos personas; es pues necesario que
tra el orden de la Providencia, puesto que la Pro Dios mismo las haya castigado. Mas es falso que el
videncia quiere que cada uno escoja el estado que crimen de Ananias y Safira fuese una simple men
mas le convenga; ni contra el bien de la socie tira. Como los fieles de Jerusalen habian puesto sus
dad, pues que está interesada en que nadie sea inco bienes en comun, nadie tenia derecho á subsistirá
modado en su eleccion; ni contra el derecho de sus espensas de esta comunidad, sino aquellos que se ha
semejantes, pues que estos últimos no reciben ningun bian despojado realmente de sus posesiones. Ananias
perjuicio: los solitarios causan menos daño al público y Safra, despues de haber vendido un terreno, en
que los honrados holgazanes, que abruman á la so tregaron solo una parte del precio, y guardaron lo
 ANA 99 ANC
restante; esto era un fraude: era necesario un ejem destruccion, las ciudades de los Cananeos que no se
plo de severidad para prevenir este abuso Act., c., rindiesen á los israelitas, y á los que adorasen los
y. 3 y 35. falsos dioses. Deut. c. 9, y 26; Earod. c. 22, y. 19.
Ademas segun la opinion de muchos Padres de la El pueblo reunido en Masfa, entregó al anatema á to
Iglesia, Dios castigó á estos dos esposos en este mun do el que no tomase las armas contra los Benjamitas,
do, para usar de misericordia con ellos en el otro; así para vengar el ultrage hecho á la muger de un Le—
lo han entendido Orígenes, tom. 5, in Matth. n. 15: vita. Judit. c. 19 y 21. Saul pronunció el anatema
S. Agustin, lib. 3, contra Epist. ad Parmea; c. 1, n. contra todo el que comiese cosa alguna antes de po—
3. Serm. 148, n. 1; S. Gerónimo, Epist. 8, ad De nerse el sol, en la persecucion de lo filisteos. 1. Reg.
met. V otros. Estos santos Padres se fundaron en las c. 14, y 2. Entonces se espresó el anatema por la
palabras de S. Pablo. 1:º Cor. c. 11, y 30. «Cuan palabra KEREM devastacion, destruccion. Todo el
do Dios nos juzga nos corrige á fin de que nos libre ¿muerte,
quebrantase este precepto debia ser condenado
mos de la eterna condenacion, en que quedariamos
iguales con los pecadores, cuyos ejemplos imitamos». Algunos de los que han criticado la sagrada Escri
A la verdad, no deja de haber algunas personas que tura infirieron por lo que acabamos de espresar, que
temen que estos dos esposos culpables se hayan con los hebreos ofrecian á Dios sacrificios de sangre hu—
denado, mas suponen en la mentira de que se trata, mana. Segun su opinion, se dice en el Levit. c. 27, y.
unas circunstancias y motivos que no son ni ciertos 28 y 29. «Todo lo que un poseedor haya entregado
ni aprobados por la sagrada Escritura. al anatema, sea hombre, sea animal, 6 sea campo,
será consagrado al Señor, no podrá ser rescatado,
Amatema. Este término, tomado del griego sino que debe ser muerto». Sostenemos que esta ver—
ANATzEMA significa literalmente colocado en alto: se sion no es esacta. 1 º Es un absurdo el mandar que
llamaban asi las ofrendas hechas á la Divinidad, y un campo, ó un pedazo de tierra, ó sus productos
cuando se colgaban en la bóveda ó en las paredes de sean condenados á muerte. 2.º Sí asi fuese habria
los templos para esponerlas á la vista; de aqui es que eontradiccion entre esta ley y la del y. 2 de este mis
anatema ha significado cosa consagrada. Como se po mo capítulo, en donde se dice que toda persona ofre—
nian tambien á la vista ciertos objetos odiosos, como cida al Señor será rescatada. 3 º En el Deuteronomio
por ejemplo, la cabeza de un culpable ó enemigo, c. 12, y., 30, se prohibe severamente el ofrecer sa
sus armas y sus despojos, anatema ha espresado una erificio alguno de sangre humana, y no hay ningun
cosa abominada ó abominable, destinada al odio pú ejemplo cierto de semejante sacrificio en la Escritu
blico ó á la destruccion; y este sentido ha llegado á ra. . KEREM significa constantemente el anatema
ser el mas comun. Asi la Iglesia ha pronunciado el pronunciado y egecutado contra los enemigos del Es
anatema contra los hereges y contra los que cor— tado; y hubiera sido una locura el que un israelita
rompen la pureza de la fé, y ecsisten muchos decretos pronunciase el anatema contra lo que poseia, mien—
ó cánones de concilios concebidos en estos términos: tras que podia hacer de ello un don ó una oblacion
Si alguno dice ó sostiene tal ó cual error, sea anate al Señor.
ma, es decir, sea separado de la comunion de los fie Es pues preciso traducir de este modo á la letra el
les, considerado como un hombre que está fuera del citado pasage, «Todo anatema que un hombre hu
camino de la salvacion y en estado de ccndenacion; biese jurado al Señor, á escepción de lo que posee,
que ningun fiel tenga trato ni comunicacion con él. ya fuesen hombres, animales, ó terrenos que le per
Y esto es lo que se llama anatema judiciario; solo teneciesen, no será ni vendido ni rescatado; porque
puede pronunciarse este anatema por un superior que todo anatema es sagrado delante del Señor. Todo
tenga autoridad y jurisdicion, á saber, por un conci anatema jurado asi, no será rescatado, sino conde
lio, por el Papa, ó por un obispo. nado á muerte». Dios permitia á un hombre, el res
Cuando un herege quiere convertirse y reconci catar lo que le habia prometido que le pertenecia,
liarse con la Iglesia, se le obliga á anatematizar sus IrlaS 10 rescatar lo que tenian los enemigos, y no
errores, esto es, á abjurarlos y renunciará ellos. le pertenecia. Es cierto que la preposicion mi ó min
S. Pablo dice Rom. c. 9, y. 3. «En otro tiempo ¿? testo hebreo, que se traduce comunmente por de
deseaba yo ser anatematizado por el mismo Jesu ó ear significa tambien fuera, ercepto. Véase Glasii,
cristo; mas ahora que tengo abiertos los ojos por su Philolg. Sacra, col. 1158, 1159, 1166.
misericordia, querria de la misma suerte, á cual—
quier precio reduciros á su doctrina, pues sois mis Aneiano. El gobierno mas natural y mas sa
hermanos, segun la carne». Entre los intérpretes bio es el de los ancianos. Entre los patriarcas, toda la
unos opinan que en este pasage anatema significa ser autoridad estaba en manos de los gefes de familia.
maldecido ó reprobado por el mismo Jesucristo; otros Moisés, por el consejo de Jetrho, escogió en virtud de
sostienen que se debe entender: yo deseaba el ser se este consejo un número de ancianos en cada tribu pa
parado y sacrificado por Jesucristo á beneficio de la ra administrar justicia y hacer observar la policia en
salvacion de mis hermanos. tre el pueblo. Earod. c. 18, y 18 y sig. Entre los ro
Se hallan en el antiguo Testamento ejemplos de es manos el Senado era la asamblea de ancianos, senes.
ta doble significacion: vemos que Judit ofrece al Señor Los apóstoles establecieron esta forma de gobierno
las armas de Holofernes como anatema de olvido, ó para conservar el orden en la Iglesia de Dios. S. Pa—
monumento contra el olvido. Judit. c. 16, blo, que no podia pasar á Efeso, hizo venirá los an
cianos de esta glesia, y les dijo: Atended sobre vos
Moisés quiso que se entregasen al anatema ó á la otros mismos, y sobre todo el rebaño de que el Es
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píritu Santo os ha establecido obispos, para gobernar ¿ «No se infiere de todo esto, que los ángeles son in
la Iglesia de Dios, que se adquirió con su sangre. feriores á Jesucristo, no siendo ellos mas que unos
Act. c. 20, y. 17 y 28. Los apóstoles deliberaron con espíritus criados de Dios, y destinados por él á la
los ancianos en el concilio de Jerusalen, y decidie defensa y tutela de los hombres que esperan entrará
ron juntos, c. 15, y. 6, 22, 23 y 1. S. Juan que gozar la herencia celestial»? Por la misma razon se
represento en el Apocalipsis el orden de las asambleas da algunas veces este nombre á los hombres en la
cristianas, ó del oficio divino, coloca al presidente sagrada , Escritura; como á los sacerdotes en el capí
sobre un trono, y á veinte y cuatro ancianos senta tulo 11 del profeta Malaquias; por S. Mateo á S. Juan
dos en unas sillas al rededor de él. A poc. c. y 5. Es Bautista; c. 11, y. 10; y, por S. Juan en el Apoca—
tos ancianos fueron llamados Sacerdotes, PREsByTERoy lipsis á los obispos de muchas Iglesias.
viejos; el presidente, obispo, Epvskopos vigilante. Asi Segun los setenta, el Mesías es llamado en Isaías,
se formó la gerarquia. C.9, 6, el angel del gran consejo, nombre que es—
No se infiere de aqui que el gobierno de la Iglesia, presa su ministerio y no su naturaleza; lo mismo ve
en su origen, fuese puramente democrático, como lo mos en el testo hebreo, donde melec, significa angel
sostienen los calvinistas; que los obispos no debian ó enviado. Sin embargo, ha prevalecido el uso de de
ni podian decidir nada sin haber recibido el consejo signar con este término la idea de una naturaleza in
de los ancianos. corpórea, inteligente, y superior al alma del hombre,
Vemos, por las epístolas de S. Pablo á Timoteo y mas creada, é inferior á Dios.
á Tito, que les atribuye la autoridad y potestad de Aunque no pueda probarse por la razon la ecsis
¿ su grey, sin estar obligados á consullará tencia de los ángeles, todas las religiones la han ad
mitido en virtud de la revelacion. A escepcion de los
a asamblea, á no ser en las circunstancias en que se
Saducéos, los judios creian en ella, y aun los Sama
necesitaba algun testimonio. W. Obispo, GERARQUIA.
ritanos y los Caraitas, segun el testimonio de Abusaid,
Andres (San) apostol, hermano de S. Pedro, autor de una version árabe del Pentateuco, y segun
nació en Bethsaida, fue discípulo de S. Juan Bautis— el comentario de Aaron, judio caraita, sobre el mis
ta, y despues de Jesucristo. Se cree comunmente que mo libro; obras manuscritas que se hallan en la bi
despues de la venida del Espíritu Santo predicó el blioteca del rey. Los cristianos siguieron la misma
Evangelio en Acaya, y fue martirizado en Patras. No doctrina; mas los Padres están divididos en opinio
ha quedado ningun escrito de este santo apostol; las nes acerca de la naturaleza de los ángeles. Unos, co—
aclas de su martirio, escritas bajo el nombre de los mo Tertulaino, Orígenes y Clemente de Alejandria,
sacerdotes de Acaya, estan puestas en duda por los etc., creyeron que estaban revestidos de un cuerpo
sabios. Tillemont, en sus memorias sobre la historia muy sutil. Otros, como S. Basilio, S. Atanasio, San
eclesiástica, t. 1.”, p. 320, las considera como apó Cirilo, S. Gregorio Niseno, S. Juan Crisóstomo, etc.,
crifas; el P. Alejandro, historia eclesiástica, t. 1.", los consideraron como unos seres puramente espiri
sostiene que son auténticas. M. Woog, profesor de tuales. Esta es la opinion de toda la Iglesia; mas la
historia y antigüedades en Leipsic, ha seguido la mis sagrada Escritura manifiesta que frecuentemente han
ma opinion en unas sabias disertaciones que publi aparecido los ángeles revestidos de un cuerpo; asi que
có en 1748, y 1751. No nos loca á nosotros resol— no vemos cuál pueda ser la razon de tenerse por pe—
Ver es la Cueslion. ligrosa la opinión de Tertuliano y demas Padres ar
Los Moscovilas estan persuadidos de que S. A n riba citados.
dres llevó el Evangelio á su pais. Como muchos an Muchos, en verdad, creyeron que los ángeles ha
tiguos dijeron que este apostol predicó en la Scitia, º bian tenido comunicacion con las hijas de los hom
si se debiese entender que predicó en la Scitia euro— bres, y habian engendrado á los gigantes. Tal era la
pea; esta tradicion seria favorable á la opinion de los comun opinion de los filósofos, de que los demonios,
Moscovitas, mas nada hay de cierto sobre este punto. esto es, los genios ó inteligencias superiores á la hu
Fabricius Salut. luar. Ev. etc. p. 98. manidad, no eran espíritus puros, sino que estaban
Esta incertidumbre, en la que nos han dejado la revestidos de un cuerpo sutil y aéreo; por consecuen
mayor parte de los apóstoles tocante al sitio, dura cia creian que un gran número de estos genios solici
cion y éxito de sus trabajos, demuestra que no obra taban la comunicacion con las mugeres, les agradaba
ban ni por interés ni por vanidad: unos predicado el olor de los sacrificios; y se complacian frecuente—
res envanecidos con su gloria, ó guiados por algun mente en hacer mal á los hombres. Luciano, Plutar
motivo humano, hubieran puesto mayor cuidado en co, Porfirio y otros, participaban de la misma opi
dejar algunos monumentos que testificasen sus ac nion; no vemos por qué han de ser tan reprensibles
ciones. los Padres en a seguido. Esta opinion les pare—
ció confirmada por la version de los Setenta. Génesis
Angel, sustancia espiritual, inteligente, y la c. 6, y . 2, de la que muchos egemplares dicen. Los án
primera en dignidad entre las criaturas. geles de Dios, al ver la belleza de las hijas de los hom
Este término está formado del griego AGGELos que bres, etc. en vez de que en el hebreo, samaritano, si
significa mensagero ó enciado; y es, dicen los teólo riaco y vulgata, se lee: los hijos de Dios; en el caldéo
gos, una denominacion no de naturaleza sino de ofi y en el arábigo: los hijos de los grandes ó de los prín
cio, tomada del ministerio que ejercen los ángeles, cipes. No fue necesario que los Padres tomasen esta
y que consiste en comunicar las órdenes de Dios, ó opinion del libro apócrifo de Enoch.
revelar á los hombres su voluntad. Tal es la idea que Mas qué perniciosa consecuencia pudo sacarse de
de los ángeles nos da S. Pablo, Hebr. c. 1.° y 14. aquí? Se infiere, dicen, que los Padres no tenian no
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cion alguna de la perfecta espiritualidad. Sin embar— sido criados en estado de gracia y destinados á la fe.-
go, la admitian por lo menos en Dios, pues que le su— licidad, mas que muchos cayeron de este estado por
ponian criador. Pero aun cuando hubiesen creido que su orgullo, que fueron precipitados en el infierno, v
la espiritualidad no podia tener lugar en ninguna ¿s un suplicio eterno, mientras que los
criatura, no seria, sin embargo, esto un justo motivo demas fueron confirmados en gracia, y son dichosos
para vituperarlos con tanta agritud como lo han eje para siempre. Estos últimos son llamados ángeles bue
cula io los protestantes. «Ved aqui, dice Barbeyrac, nos ó simplemente ángeles; los otros son llamados
á los Padres de los primeros siglos perfectamente ángeles malos, diablos ó demonios.
conformes enlre sí acerca de un error grosero, bebi Este dogma de la caida de los ángeles está fundado
do en una mala filosofia, en un libro apócrifo, ó en la en la segunda epístola de S. Pedro, c. 2, y. , en
falsa suposicion de que la version de los Setenta era donde se dice que «Dios no perdonó á los ángeles que
inspirada. Que se nos venga todavia á presentar el pecaron, sino que habiéndolos precipitado en el abis—
consentimiento de los Padres como una muestra segu mo, los encerró en el con la cadena invencible de su
ra de la tradicion.» Tratado de la moral de los Padres, poder, para que fuesen alormentados y reservados
c. 2, S. 3; este tono de lriunfo está muy mal fun— nasa el juicio universal»; y en la de S. Judas, y, 6,
dado. en donde leemos que «Dios reservo para el juicio del
1." Quisiéramos saber por qué demostracion ó gran dia en elernos y oscuros calabozos á los ánge
por qué testo espreso de la Sagrada Escritura se pue les, que, no habiendo conservado su antigua digni
de probar que la opinion de los Padres era un error dad, cayeron precipitados de su domicilió.» (Pará
grosero; desafiamos á Barbeyrac y á todos sus com frasis.)
pañeros á que prueben la perfecta espiritualidad de Otro de los artículos de la creencia cristiana es el
los ángeles de otro modo que por la tradicion y por la
que Dios dió á cada uno de nosotros un angel de guar—
creencia universal de lº lglesia. da: se infiere esta verdad de muchos pasages de la
2." Es falso que todos los antiguos Padres hayan Sagrada Escritura. Gén. c. 8, y. í6; Mat. c. 18,
tenido una misma opinion acerca de la naturaleza de y. 10; Act. c. 12, y 15; &c. Esta es una tradicion
los ángeles: desde el principio del cuarto siglo la COnslanle.
mayor parte de ellos sóstuvieron la perfecla espiri Alginos Padres de la Iglesia han creido tambien
¿ El padre Pelavio, Dogm. theol: t. 3, l. 1." cada hombre desde que nace está acompañado
c. 3, citó entre los griegos, á Tito, obispo de Bostres, á e dos ángeles, uno bueno que le conduce al bien, y
Didymo, á S. Basilio, á S. Gregorio Niseno, á S. Gre otro malo que le inclina al mal: se fundan en un pasa
gorio Nacianceno, á Eusebio de Cesarea, á S. Epifanio, ge del Pastor de Hermas, que lo enseñó asi; más es
á S. Juan Crisóstomo, a Teodorelo y á otros muchos ta opinion no tuvo un gran número de partidarios.
mas modernos; entre los latinos, á Amario Victorino, Hubiera sido una temeridad el querer formular
á Lactancio, á S. Leon, á Junilio el africano, á acerca del número de los ángeles, acerca de su estado,
S. Gregorio el Grande, y á los que les han sucedido. de su poder y de sus funciones, unas cuestiones que
Se ha repetido cien veces á los protestantes, que la no pueden resolverse por la Sagrada Escritura ni por
tradicion no se considera como regla de fé, sino cuan la tradicion.
do es constante y casi enteramente unánime. Una de las disputas mas importantes que sostene
3.°. No hay prueba alguna de que los Padres ha mos contra los protestantes es la de saber si es per
yan sido engañados por la lectura del libro aprócrifo mitido el tributar á los ángeles un culto religioso, in
de Enoch, asi como iampoco de que la mayor parte vocarlos y contar con sus ausilios y su intercesion.
le hayan consultado, antes bien parece que los mas Este es el sentimiento de la Iglesia católica; mas sus
antiguos ni aun tuvieron noticia del referido libro. enemigos, se le echan en cara como un error, opo—
Aun cuando los antiguos Padres no hubieran con niéndole las mismas objeciones que hacen contra el
siderado como inspirada la version de los Selenta, de culto de los santos.
qué otra traduccion podian servirse? Es muy singu Dicen que S. Pablo prohibió terminantemente este
lar que se les acrimine el no haber leido el lesto he culto á los Colosenses; c. 2, y 18, despues de ha -
breo que los judios ocultaban con cuidado, y el no berlos separado del judaismo y de las ceremonias le
haber sabido el hebreo que los judios no querian en gales, les dice: «No os dejeis tampoco engañar, her
señará nadie. Al escuchar los raciocinios de los pro manos mios, de los que, gloriándose de haber llegado
testantes, parece que no se puede ser buen cristiano á saber lo que está oculto á los hombres, y disputan—
sin haber aprendido el hebreo, y que Dios no prove do de cosas que no saben por dicho del Espíritu San
yó con acierto, respecto á la salvacion de los prime to, ni lampoco han visto, adoran á los ángeles con
ros fieles, en el mero hecho de no darles mas que una un culto religioso que, no les conviene, con el pretes
version griega. *
to de que la Magestad de Dios es inaccesible á los hom
Segun el parecer comun de los Padres y de los teó bres. Estos ales no estan unidos á nuestra cabeza,
logos, los ángeles están distribuidos en tres gerarquías, Cristo, de quien la lglesia, su cuerpo místico, recibe
y cada gerarquía en tres órdenes ó coros. La prime los espíritus y las fuerzas, hasta llegar á su perfec
ra es la de los serafines, de los querubines y de los cion, comunicados por los conductos establecidos.»
tronos; la segunda comprende las dominaciones, las (Paráfrasis).
virtudes y las potestades; la tercera los principados, Añaden (lue, cuando S. Juan quiso prosternarse
los arcángeles y los ángeles. Este último nombre ha ante el angel del Señor y adorarle, este anqel le diio:
llegado á ser comun á todos en general. No hagas til, adora á Dios, Apo c. 13, y 19; que
La Iglesia cristiana cree que todos los ángeles han el concilio
TOM) I.
de Laodicea, celebrado en el añó 364, can.
19
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35, dice: «No deben los cristianos abandonar la Igle No hay cosa mas frívola que los sofismas de los pro
sia de Dios para ir á invocar á los ángeles, y tener lestantes. Segun S. Pablo, dicen, dando culto á los
reuniones prohibidas Si pues se halla alguno dedi ángeles se separa uno del gefe; segun el concilio de
cado á esta idolatría oculta, sea anatemalizado por Laodicea, se abandona á Jesucristo y se cae en la
que abandonóá nuestro Señor Jesucristo hijo de Dios, idolalría; luego todo cullo dado á los ángeles es una
para entregarse á la idolatría.» Finalmente, dicen los idolatría. Si, cuando se forma de los ángeles la misma
protestantes, una prueba de que los judios conside idea que tenian de ellos Zoroastres, los gnósticos y
raron siempre como supersticioso, criminal é idolá los paganos; pues que en la caso se forma de los án
trico todo culto que no fuese dedicado á Dios solo, geles unos dioses, esto es, unos seres poderosos por
es el que jamás dieron culto alguno á los ángeles ; la sí mismos é independientes; pero cuando se les cón
secta de los caraítas, la mas escrupulosamente adhe— sidera como simples ministros ó enviados de Dios, es
rida al testo de la Escritura, enseña espresamente que un absurdo el decir que al honrarlos no se honra á
no se les debe dar culto alguno. - - -
Dios; puesto que Jesucristo manifiesta lo contrario.
Respondemos á los proleslantes que si quisiesen Una cosa es, replican nuestros adversarios, el hon
convenir una vez con nosotros en el sentido que se rar á los ángeles, y otra es darles un culto religioso.
debe dar á la voz culto, ó culto religioso, se termina Falsa distincion. Culto, honor, respeto y veneracion,
ria bien pronto la dificultad entre ellos y nosotros. son sinónimos: todo culto, todo honor, d direcla
Mas en tanto que se obstinen en sostener que todo mente á Dios, es un acto de religion ; luego el culto,
culto religioso es un culto divino y supremo, jamas el honor hecho á un enviado de Dios, y por respeto
estaremos conformes con ellos, porque esta prelen á Dios, se refiere á Dios; porqué no se ha de llamar
sion es evidentemente falsa; y probaremos lo contra culto religioso? Que el angel del Apocalipsis no qui
rio en el artículo CULTo. -siera ser adorado como Dios, estó no es estraño, y
Han observado los sábios que ya, desde el tiempo nada se sigue de aqui.
de S. Pablo, la doctrina de Zoroasires habia penetra Es cierto que no hay en la Sagrada Escritura nin
do en el Asia y en la Grecia: pues, vemos por el Zend gun vestigio del culto tribulado á los ángeles? Gén.,
A cesta que Zoroastres admite un númeró infinito de c. 32, y.26. Jacob pidió al angel, contra el cual ha
ángeles o de espíritus medianeros á quienes atribuye, bia luchado, su bendicion; c. 8, y, 16, el mismo pa
no solamente un poder de intercesion subordinado á triarca al bendicir á los hijos de José dijo: «Que el
la providencia contínua de Dios, sino un poder lan Dios que me ha alimentado desde mi nacimiento, y
absoluto como , el que los paganos atribuian á sus el angel que me libró de todo mal, bendigan á estos
dioses. De donde se infiere que el culto rendido á es niños.», Apesar de todo cuanto digan sobre este par—
la especie de dioses secundarios no podia de nin ticular los prolestantes, ved aqui una invocacion; y
gun modo referirse á Dios; que este culto era por lo comprendieron tan perfeclaniente, que muchos de
consiguiente un verdadero politeismo y una idolatría sus comenladores, para esquivar las consecuencias,
pura. V. PAnsis. En este manantial emponzoñado dijeron que por este angel se debe entender el Ver
fué donde Simon, Menandro, Valentin, Cerinto y los bo Divino ó el Mesías; mas nada hay en el testo que
gnósticos bebieron la nocion de sus eonos ó dioses autorice este comentario. Si hablásemos como Jacob,
secundarios, á quienes alribuian lo mismo que Pla dirian que faltábamos al respeto que se debe tenerá
ton, la formacion y el gobierno del mundo; segun su Dios, colocando á un angel en misma línea, y
opinion , estos espíritus ó genios estaban encargados uniendo sus bendiciones á las de Dios,
de todos los cuidados de la Providencia; el Dios su Ecod., c. 23, y. 20. Dios dijo á los israelitas: «Yo
premo no se mezclaba en nada, y ningun culto se le enviaré mi angel ante vos.... reverenciadle, y es
debia tributar. cuchad su voz, por ningun caso le menosprecieis, por
En esta hipótesis, S. Pablo tuvo mucha razon en que si haceis algun mal, no os lo pasará, y en él se
decir que los partidarios de este error no conocian halla el nombre mio.» Los comentadores prolestan
nada, que estaban seducidos por su imaginacion, que les toman tambien este angel por el lijo de Dios; mas
no permanecian adheridos al gee; y el concilio de estan muy seguros en el que debe entenderse asi? En
Laodicea decidió con mucho fundamento que aban vez de traducir recerenciadle, ponen, tened cuidado de
donaban á Jesucristo para entregarse á la idolatría; él; ningun pasage de la Sagrada Escritura los inco
ques que el culto que dan á los ángeles ó á los es moda. Num., c. 22, y . 31. Balaam se postró ante
píritus no podia referirse á Dios como ni el de los el angel del Señor que se le apareció.
paganos. - - -
Josué c. 5.3.1, ve á un personage armado, el
Mas cuando se principia por creer que los ángeles cual le dijo; Yo soy el príncipe de los ejércitos del
no son mas que unos enviados por Dios y los ejecuto Señor. Josué se postra, penetrado de respeto y le
res de sus órdenes, que no tienen mas poder que el dice: ¿Qué quiere mi Señor de este su servidor? El
que Dios les dá, que no hacen nada mas que lo que angel respondió: descalzos: la tierra que pisais es
Dios les manda, el honor, el respelo y el culto que se santas. Josué obedece. Esta fué la señal de respeto
les dá, no se dirige principalmente á Dios? Jesucris que Dios, habia exigido de Moises cuando se le apa
escu reció en la zarza que estaba ardiendo. Ecod., c. 3
to susosenviados:
dijoeláque
cha; desprecia, quedesprecia;
«Elme y elmeº
os escucha, me y. 3. Se sostendrá todavía que no es este un culto?
En el libro de los Jueces, c. 13, y, 21. Manué con
desprecia, desprecia al que me ha enviado.» Luc., c. vencido
10, y. 16. «El que os recibe me recibe» Mat. c. 10, de el personage que le habia hablado
y.0. «Lo que habeis hecho al menor de mis herma era el angel del Señor, ¿ esp0sa: «Moriremos,
nos, lo habeis hecho á mí mismo.» Epist. 25, y.0. porque hemos visto á Dios.» Estaba pues persuadidó
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de que este angel hacia las veces de Dios; le rehusó tin, lib. 1, locut. in Genes., se sirven de las palabras
presentar sus respetos? Daniel, c. 10, y. 9, queda de Jacob, Gén., c. 8,y.16, para probar que es lí
postrado ante el anqel que le hablaba; y, 16 y 17, y cito el invocar otros seres ademas de Dios. El Padre
le dijo: «Oh Señor mio, cómo podrá el siervo de mi Petavio, t. 3, de angelis, l. 2, c. 8 y 9, citó un gran
Señor dirigir su palabra al Señor mio?, Pues no ha número de otros Padres de la Iglesia; mas los pro—
quedado en mí vigor ninguno, y hasta la respiracion testantes nos abandonan sin dificultad todos los del
me falta» El profeta creía hablar á Dios cuando ha V siglo y de los siguientes; confiesan que desde en
blaba con su angel; el espanto de que estaba poseido tonces fue establecido en la Iglesia el culto de los
era ciertamente un respecto religioso. ángeles y los santos. Aun cuando no pudieramos pro—
Zacar, c, 1, y, 12 Un angel ruega á Dios por la bar que lo ha sido mas pronto, nos parece que á los
libertad de los judios, y por su restablecimiento en doscientos años despues de la muerte de los apóstoles,
la Judea. se podia saber mejor que en el XVI siglo cuál era su
Uu anqel dice á Tobias, c. 12, y. 12: «Cuando tu doctrina. Dissert. sobre los angeles buenos y malos,
orabas con lágrimas, yo presentaba al Señor tus ora Biblia de Aviñon, t. 13, p. 255; Thomassino, trata.
ciones». S. Juan en el Apocalipsis vió en espíritu do de las fiestas, l. 2, c, 22; Vidas de los Padres y de
un angel que ofrecia ante el trono de Dios las oracio los Mártires, 8 de mayo y 29 de setiembre.
nes de los santos, c. 8, y. 3 y 4. * Terminemos este artículo con un pasage de
Estos son los pasages en que se fundaron los Pa B0suei, Prefacio del Apocalipsis sobre el ministerio de
dres de la Iglesia para sostener que no es solamente los ángeles.
permitido sino tambien º laudable el honrar, «Se los ve ir sin cesar del cielo á la tierra, y de la
orar é invocará los ángeles y á los santos. tierra al cielo; llevan, interpretan y egecutan las ór
Celso dijo: «Puesto que los cristianos tributan, un denes de Dios, y no solo las órdenes relativas á la
culto, no solo á Dios sino tambien á su Hijo, deben salvacion, sino tambien las que sirven para el casti
tambien por consiguiente tributarle á sus ministros, go, como que imprimen el signo saludable sobre la
y por lo tanto á los genios ó á los espíritus». Orig., frente de los escogidos de Dios; (Apoc. c. 7, y. 3.),
l. 8, n. 13., responde: «Si Celso hubiera compren y aterraron al dragon que quería tragarse á la Igle
dido cuáles son despues del Hijo único de Dios sus sia (c. 12, y . 7,); puesto que ofrecen sobre el altar
verdaderos ministros, como Gabriel, Miguel, los de de oro, que es Jesucrito, los perfumes, que son las
mas ángeles y arcángeles, , y que sostuvo que se les oraciones de los santos. c. 8, y, 3. Todo esto no es
debia dar un culto, quizá al tratar de aclarar el sen otra cosa que la egecucion de lo que se ha dicho, que
tido de la voz culto y las prácticas del que le tribu los ángeles son unos espíritus administradores enviados
ta, yo diria lo que le conviene en esta materia, segun para desempeñar el ministerio de nuestra salvacion
mi comprension. Mas como Celso entiende por mi Heb. c. 1, y 1...Todos los antiguos creyeron des—
nistros de Dios á los demonios, á quienes los paganos de los primeros siglos, que los ángeles mediaban en
adoran, no podemos resolvernos á honrar á estos es— todas las acciones de la Iglesia (Tertuliano de Bapt.
píritus que la Escritura nos enseña ser los ministros c. 5. 6.): reconocieron un angel que presidia el
del espíritu maligno, que contribuye cuanto le es po bautismo, un angel que intervenia en la oblacion y
sible á separar á los hombres del culto de Dios». En la conducia ante el aliar sublime, que es Jesucristo,
el n. 60, dice: «Cuánto mejores que confiemos en el un angel á quien se llamaba el angel de la oracion (id.
Soberano Dios, por Jesucristo, que asi nos lo ha ense de orat, 12.) que presentaba á Dios los votos de los
ñado, pedirle no solo toda especie de ausilios sino fieles; y todo esto se funda principalmente en el ca
tambien la asistencia de los santos ángeles y de los pítulo 8.º del Apocalipsis, en donde se verá con cla
justos, á fin de que nos libren de los demonios?» En ridad la necesidad de reconocer este ministerio an
el n. 6: «Si Celso sostuvo que despues de Dios ne gélico.
cesitamos tambien otros amigos, sepa que, asi como «Los antiguos estaban tan afectados de este minis—
lo sombra sigue al cuerpo, la bondad de Dios para terio de los ángeles, que Orígenes, colocado con razon
con nosotros, nos asegura del mismo modo la bene— por los ministros en el número de los teólogos mas
volencia de los ángeles sus amigos, de las almas y es—sublimes (Jur, accomp. de las profec. p. 333), invo—
píritus; pues los ángeles conocen quiénes son los que ca pública y directamente al angel del bautismo, y
merecen los beneficios de Dios, y no solo les desean le recomienda un anciano que iba á hacerse hijo de
el bien sino que ayudan á los que quieran adorar al Jesucristo por este sacramento (Orig, Ilom. 1." in
soberano Dios, se le hacen propicio, oran con ellos, Ezch.): testimonio de la doctrina del lll siglo, que
forman unos mismos votos». El mismo Orígenes los vanos críticos del ministro Daillé jamás podrán
invoca á su angel de guarda, Homil., 1. in Ezech., arrebatarnos.
n.7. Acerca del primero de estos pasages; Grotius y «No debemos titubear en reconocer á S. Miguel
Spencer tuvieron la buena fe de confesar que el cul como defensor de la Iglesia, á imilacion del antiguo
to tributado á los ángeles no es contrario al primer pueblo, en vista del testimoniode S. Juan (Apocalipsis
mandamiento del decálogo, y en nada deroga á lo c. 12, y, 7., y conforme al de Daniel (c. 10, 13, 21,
que se dice en el Apocalipsis, c. 19, y, 10. Algunos c. 12, y. 1.) Los protestantes, que imbuidos en una
teólogos anglicanos pensaron del mismo modo. Cier idea grosera, creen quitar siempre á Dios todo cuan
tos mártires del siglo III escribian á S.Cipriano, to dan á sus santos y á sus ángeles en el cumplimien
Epist. 77: «Oramos con el fin de que Dios, Jesucris to de sus obras, quieren que S. Miguel sea en el Apo—
to y los ángeles nos sean propicios en todas nuestras calipsis Jesucristo mismo el Príncipe de los ángeles
oraciones». S. Gerónimo, Comm in Ps. 15; S. Agus y aparentemente en Daniel el Verbo concebido eter
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namente en el seno de Dios (Du Moul. acc. de los católica, Titúlase. Del culto debido á Dios, en cuy0
Prof, sobre el c. 12, y .7, p. 173 y 178). Pero es po S. IV se esplica de una manera clara é interesante
sible que nunca han de comprender el recto, espíritu lo que dicen S. Pablo y el concilio de Laodicea sobre
de la sagrada Escritura? No ven que Daniel nos ha el culto de los ángeles. La claridad con aque alli se
bla del príncipe de los griegos, del príncipe de los demuestra hasta donde llega el verdadero culto de
persas (10, 13, 20), esto es, sin dificultad, de los los ángeles, y el falso que reprueban á la vez S. Pa
ángeles que presidian por orden de Dios á estas na blo y el concilio citado, merece consultarse.
ciones; y que S. Miguel es llamado en el mismo sen
tido el príncipe de la sinagoga; ó como el mismo ar Angelitas. Hereges sectarios de Sabelio, los
cangel Gabriel lo esplica á Daniel, Miguel, vuestro cuales se reunian en Alejandría en un sito llamado
principe? y en otra parte, mas espresamente: Miguel, Agelius ó Angelius. Véase á Nicéforo, lib. 18, c. 9;
un gran príncipe, que está establecido para presidir á Pratéolo, en la voz angelitas. Uno y otro necesitan
á los hijos de cuestro pueblo? Y qué nos dice S. Ga de garante. Lo mas probable es, que los angelitas eran
briel acerca de este gran príncipe? Miguel, dice, unos sectarios que rendian á los ángeles un culto su
uno de los primeros príncipes (10, 21, 12, 1) Es el persticioso como los gnósticos.
erbo de Dios, igual á su Padre; el Criador de todos
los ángeles, y el Soberano de todos estos príncipes, A un gelus. Oracion que rezan los católicos roma
el que es solo uno de los primeros entre ellos Ecsis nos, especialmente en Francia, donde fue establecido
te aqui un caracter digno del Hijo de Dios? Porque su uso por Luis XI., quien ordenó que se tocase una
si el Miguel de que habla Daniel no es mas que un campana tres veces aldia, por la mañana, almedio dia,
angel, el de S. Juan, que es visiblemente el mismo y por la tarde, para advertirá los fieles rezasen esla
de que habla Daniel, no puede ser otra cosa. Si el oracion en honor de la santa Virgen, y dar gracias á
dragon y sus ángeles pelean contra la Iglesia, no , se Dios por el misterio de la Encarnacion.
debe estrañar el que S. Miguel y sus ángeles la de Se compone de tres versículos equivalentes al A ve
fiendan. (Apoc. c. 12, y 7.) Si el dragon prevée el María, y de una oracion por la que se pide á Dios su
porvenir y redobla sus esfuerzos contra la Iglesia, gracia y la salvacion elerna por los méritos de Jesu
cuando ve el corto tiempo que le queda para combatir cristo. El nombre de esta oracion dimana del primer
la en esta vida por sí mismo, (12); por qué razon no y ersículo, Angelus Dómini, etc. Se llama tambien
habian de ser iluminados los santos ángeles con una el Perdon, porque muchos soberanos ponlífices con
luz divina para preveer las tentaciones que se prepa cedieron indulgencias. Los que miran esta práctica y
ran contra los santos, y prevenirles con sus ausilios? otras muchas semejantes como unas devociones popu
«Cuando veo en los profetas, en el Apocalipsis y lares estan persuadidos, sin duda, de que solo el pueblo
en el Evangelio mismo á este angel de los persas, debe acordarse que es cristiano. Dar gracias á Dios
al de los griegos y al de los judios (Dan. 10, 13, 20, por el misterio de la Encarnacion y por la redencion
21, 12, 1."), al angel de los tiernos infantes, que del mundo, adorar al Verbo divino en el seno de Ma
toman la defensa ante Dios contra los que les escan ría, implorar el ausilio de esta Santa Madre de Dios,
lizan (Mat., 18, 10 ), al angel de las aguas, al es ciertamente una devocion muy sólida, de la que
del fuego (Apoc. 1, 18, 16, 5), y olros igualmente, y ningun cristiano debe avergonzarse.
cuando veo entre todos estos ángeles al que coloca
sobre el altar el celestial incienso de las oraciones (H. Anglieano. Se llama religion anglicana, la que
8, 3,) reconozco en estas palabras una especie de está autorizada en Inglaterra por las leyes, para dis
mediacion de los sanlos ángeles; veo al mismo tiem linguirla de las que estan solamente toleradas. De to
po el fundamento que pudo haber dado ocasion á los das las comuniones cristianas no católicas, los angli
paganos para distribuir sus divinidades en los ele canos son los que menos se apartan de la creencia de
mentos y en los reinos para presidirlos; pues todo la Iglesia romana; rebalen sin embargo un gran nú
error se funda sobre alguna verdad de la que se abu mero de articulos esenciales, Tambien por esta razon
sa. Mas no permita Dios vea yo nada en todas estas los demas protestantes les echan en cara el inclinarse
espresiones de la Escritura que perjudique á la me— siempre al papismo, haber conservado grandes restos
diacion de Jesucristo, á quien todos los espíritus ce de él, y no haber hecho la reforma sino á medias. No
lestiales reconocen por su Señor, ó que caiga en estos es siempre fácil á los teólogos anglicanos el defen
errores de los paganos, pues que hay una infinila di derse, el mostrar por qué se detuvieron en el camino,
erencia entre el reconocer, como ellos, un Dios, cuya y por qué escluyeron tal ó cual artículo, y conserva
accion no puede estenderse á todo, ó que tiene ne— ron otros.
cesidad de ser ausiliado por unos subalternos, co En la revolucion que padeció la religion en Ingla
mo los reyes de la tierra, cuya potestad es limitada, terra, deben distinguirse cuatro épocas principales:
y un Dios que haciéndolo todo, y pudiéndolo todo, La primera bajo Enrique VIII., cuando este príncipe
onra á sus criaturas, asociándolas, cuando le agra por sacudir el yugo de la santa sede y de la Iglesia ro
da y del modo que le agrada, á su accion!» mana, se declarógefe soberano de la Iglesia anglica
5” Por no alargar demasiado algunos artícu na, y prohibió reconocer ninguna otra autoridad es
los, preciso es hacer solamente remisiones, que pue piritual ó temporal mas que la suya. Sin embargo no
den evacuar los lectores entendidos. Respecto de este tocó ni á los demás puntos de doctrina, ni al culto es—
particular puede verse un fragmento del célebre Bos terno establecido en la Iglesia católica.
suel, dirigido á contestará varios ministros protes La segunda, bajo Eduardo VI., su hijo y sucesor,
tantes jue impugnaron la Esposicion de la doctrina Despues que los partidarios de Lutero y Calvino sem
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braron sus errores entre los ingleses, se decidió por mas advierte que no se debe pensar en ella de miedo á
acta del parlamento en 1547, que se reformase la dis caer en la presuncion ó en la desesperacion. El 18.º
ciplina eclesiástica y la forma ¿ culto; lo que se eje decide que nadie puede salvarse sin conocer á Jesu
culó en 1548; mas tampoco se convino en un formu— cristo.
lario de doctrina, ó en una prof sion de fé. Segun el 19, la lglesia es la reunion de todos los
La tercera, bajo la reina María, hermana de Eduar fieles, en donde se predica la pura palabra de Dios, y
do y que le sucedió. Esta princesa, celosa católica, donde los Sacramentos son bien administrados; de
hizo anular en 1553 el acta precedente, é hizo res donde se infiere que la Iglesia romana está en el error
tablecer el catolicismo. en cuanto al dogma, á la moral y al culto esterno.
Finalmente, bajo la reina Isabel, otra hija de En ¿Este artículo es muy esencial para la salvacion? está
rique VIII., que habia sido educada en las opiniones de claramente revelado en la Escritura Sagrada? Segun
los protestantes, el parlamento, el año 1559, renovó los artículos 20 y 21, no puede la Iglesia decidir ni
cuanto habia sido hecho bajo Eduardo VI, y proscri— establecer nada mas que lo que esté contenido en la
bió de nuevo el calolicismo. Mas la confesion de fé an Escritura santa: los concilios, aun generales, pueden
glicana no fue erigida hasta tres años despues, en un engañarse, y con efecto, se han engañado frecuente—
sínodo celebrado en Londres en 1562 Imenle.
Se la encuentra en la coleccion de las confesiones
El artículo 22 desecha la doctrina de la Iglesia ro
de fe de las iglesias reformadas, p. 99; contiene trein
mana, tocante al purgatorio, las indulgencias, la ve—
ta y nueve artículos. En los cinco primeros, se hace neracion y adoracion de las imágenes, de las reli—
profesion de creer en la Trinidad, la Encarnacion, el quias y la invocacion de los santos. Se ve con bastan—
descenso de Jesucristo á los infiernos, su resurreccion le claridad que el término adoracion esta allí afectado
y la divinidad del Espíritu Santo. En los tres siguien con malignidad.
les se admiten como canónicos todos los libros del nue Se decide en el 23 que la mision es necesaria para
vo Testamento; se escluyen del antiguo los libros de predicar y administrar los sacramentos; que es legí—
Tobias, de Judith, una parte del de Esther, la Sabi— lima la mision cuando se concede por los que tienen
duria, el Eclesiástico, Baruch , algunos capítulos de facultad para ello; mas no se dice á qué poder perte—
Daniel y los dos libros de los Macabeos : se decidió nece, si al rey, como cabeza de la Iglesia anglicana, ó
que todo lo que no se contiene en la Escritura santa al clero; este artículo era delicado y quedó indeciso.
no es necesario para la salvacion. En el octavo artí El 2 quiere que se celebre la liturgia en lengua
culo, se admite el símbolo de los apóstoles, el del vulgar.
concilio de Nicea, y el de S. Atanasió. Los sacramentos, segun el artículo 25, son los signos
Ya se puede preguntar á los anglicanos por qué de eficaces de la gracia por los cuales escita y confirma
sechan estos libros en el antiguo Testamento, mien Dios en él nuestra fé; no son mas que des, el bautismo
tras que por otra parte admiten la epístola de Santia y la comunion. Se desechan los demas porque no son,
go, la de S. Judas y el Apocalipsis, que los calvi— dicen, mas que unossignos visibles instituidos por Dios:
nistas consideran como apócrifas, precisamente por las y sin embargo, se confiesa que algunos de ellos son
mismas razones. Los socinianos sostienen contra estos una imitacion de lo que hicieron los apóstoles; es pre
que lo que se contiene en el símbolo de S. Atanasio no ciso, pues, que los apóstoles hayan hecho lo que Je
puede probarse por la Escritura santa. sucristo no les habia mandado. Es evidente que esta
Se nos anuncia tambien en la Gaceta de Francia definicion de los sacramentos es ambigua y capciosa,
del viernes 7 de marzo de 1786, que una gran parte imaginada con el desiguio de conciliar, si fuera posi
de los americanos anglicanos suprimieron de su oficio ble, la opinion de los protestantes con la creencia de
el símbolo de S. Atanasio, y quitaron del de los após la Iglesia romana.
toles y bajó á los infiernos. A consecuencia, se dice en el artículo 27, que el
En el artículo nono y los siguientes se decidió que bautismo no es solamente un signo de la profesión del
todos los hombres nacen manchados con el pecado cristianismo, sino un signo de regeneracion, el sello
original; que tienen sin embargo un libre albedrio, de nuestra adopcion, por el cual se confirma la fé y
mas que no pueden hacer ninguna obra buena sin el se aumenta la gracia por la virtud de la invocacion
ausilio preveniente de la gracia; que el hombre queda divina. Mas si la gracia se aumenta, ecsistia pues ya
justificado por la fé sola. Este último dogma es sin em en el alma del fiel antes del bautismo; ¿en qué sen
¿ terminantemente contrario á lo que dice San— tido es el bautismo una regeneracion? Este mismo ar—
tiago en el c. 2; y los dos artículos precedentes no tículo prescribe que se bautice á los niños.
son admitidos por los socinianos. El 28 es todavia menos inteligible. Contiene, que
No sabemos por qué testo de la Escritura santa para los que reciben la cena con fé, el pan que que
pueda probarse que todas las obras hechas sin la fé brantamos es la comunicacion del cuerpo de Jesucristo,
en Jesucristo son pecados art. 19; S. Pablo decide lo y que el culiz consagrado es la comunicacion de la san
gre de Jesucristo; estas son las palabras de S. Pablo,
contrario Rom. c. 1, y. 14. Se desechan por el artículo
14, las obras de supererogacion como una impiedad, mas se añade que se dá, recibe y come el cuerpo de
dando un sentido falso y absurdo á este término Véa Jesucristo solamente de un modo celestial y espiritual;
862 sUPERERoga C1ON. ue el medio por el cual se hace esto, es un objeto
El artículo 16" dice que se puede alcanzar la remi fé; que los que no tienen una fé viva, no son par
sion de los pecados por la penitencia, y condena la ticipantes de Jesucristo en manera alguna, lo cual
opinion de la inamisibilidad de la justicia sostenida se confirma en el artículo 29. Ved aquí lo que no ha
por los calvinistas. El 17º admite la predestinacion; dicho S. Pablo. Este mismo artículo reprueba la trans
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substanciacion, y el uso de conservar, de conducir, y confirmado unos decretos de concilios que pudie
de elevar y adorar el sacramento de la Eucaristia; ron engañarse, y que en efecto se engañaron.
y el 30 decide que se dehe comulgar bajo las dos es En el capítulo 5:º de este mismo plan, se recono
pecies. ce que los Padres de los cinco primeros siglos, fue
Los redactores de estos artículos hubieran queri ron los que nos designaron los libros canónicos de la
do hallar un medio entre la opinion de los luteranos Escritura, los que nos trasmitieron la historia ecle
y la de los calvinistas: se ve de qué manera salieron siástica, y refutaron las heregias de su tiempo. Mas
con su empresa; á la verdad, los luteranos se espre si se engañaron estos Padres, cómo hemos de estar
san al presente del mismo modo. V. EUCARIsTIA. seguros del juicio que formaron respecto del número
En el artículo 31 desechan la doctrina católica lo de los libros canónicos? Los calvinistas le atribuyen
cante al sacrificio de la misa , como una blasfemia. muchísimos errores, y los anglicanos no se han to
En el 32 se decidió que los obispos, los sacerdo mado la pena de justificarlos, han dejado este cuida
tes y diáconos pueden casarse: en el 33 que son vá do á los católicos. En el capítulo 6.º se declara que los
lidas las escomuniones; en el 3% que, para el buen hereges deben ser castigados por medio de las censu
orden, es necesariocon formarse con los usos y ceremo ras eclesiásticas, y por los suplicios que les imponer
nias establecidas por la autoridad pública, sin em las leyes civiles. Mas quién tiene derecho para juz
bargo, de que cada Iglesia puede instituirlos, cam gar que tal ó cual hombre es herege? Mas esto no se
biarlos ó abolirlos á su voluntad. espresa, y en vano preguntamos de qué modo se con
El 35 sanciona las homilías publicadas bajo Eduar forma semejante doctrina por la pretendida toleran
do VI, y el 36, dá, la sancion al pontifica para las cia de los ingleses.
órdenes, redactado bajo el mismo reinado. El 37 de En el capítulo 7.º se acusa á los católicos de con
clara que el rey de Inglaterra, goza de la autoridad sagrarse al servicio de Dios, por medio de una fé no
suprema sobre todos sus vasallos; que todos, aun los escrita de adorar aquello que ignoran en las reli
eclesiásticos, deben estarle sumisos en todas las cau quias, en las hostias, ó sea en las formas consagra
sas, y que él no está sujeto á ninguna jurisdicion es das, en las imágenes, de rogará Dios en un idioma
trangera; que el Papa no tiene jurisdicion alguna en desconocido, de invocar á los santos con mas frecuen
Inglaterra. Se añade, sinemhargo, que no se pretende cia que áJesucristo; de arrodillarse ante lasimáge
atribuir al rey la administracion de la palabra de nes, de suprimir la mitad de la Eucaristia; de haber
Dios, ni de los sacramentos; tiene, ó se le atribuye inventado la transustanciacion , elpurgatorio y el
al menos, el privilegio de conceder, de limilaró de mérito de las buenas obras; de renovar el sacrificio
quitar este poder á quien juzgue por conveniente. de Jesucristo por vivos y muertos; de pretender que
Los artículos siguientes condenan la doctrina de los la Iglesia romana tiene por derecho divino la juris
anabaptistas tocante á las penas capitales, la guerra dicion sobre todas las demas. Sin censurar la mane
y la profesion de las armas, y tambien la comunidad ra capciosa con que muchos de estos artículos están
de bienes y los juramentos. representados ó encubiertos, no hay alguno que no
Por poco instruido que sea un teólogo y conozca podamos probar por medio de la decision de los con
el valor de los términos, vé que esta confesion de fé, cilios y de los Padres de los cinco primeros siglos:
en la mayor parte de sus artículos, es capciosa, equí los luteranos y calvinistas no dejan de convenir en
voca, dictada por el interés político y por las circuns este punto, mas dicen que esto no basta sin la Escri
tancias; mas propia para perpetuar las disputas, que tura santa. Ved un punto de disputa, sobre el cual no
para esclarecerlas. Asi que, es de todo punto necesa se conformarán jamás nuestros adversarios.
rio que la doctrina, los usos y la disciplina de los Sin embargo, en el capítulo 8.º los anglicanos ha
anglicanos esten conformes con su profesion de fé, y cen profesion de estar unidos á todas las iglesias pro
esta contradiccion es vituperada contínuamente por testantes y á todas las iglesias cristianas ; quisiéra
los que ellos llaman no conformistas. Es por otra par mos saber en qué puede consistir esta union, cuando
te muy fácil probar semejante contradiccion compa no se tiene misma fé, ni el mismo culto, ni la
rando esta confesion de ¿ con el plan de la religion misma disciplina.
anglicana, tal como está delineado en un libro intitu Ademas de la liturgia anglicana, como se puede
lado Regni Anglia sub imperio Regina Elisabetha, ver en el padre Lebrun, Esplicacion de las ceremonias
religio et gubernatio eclesiástica, in ....º Lomdini, de la misa, tom. 7, p. 53, los anglicanos han conser
17í9 y dedicado á Jorge Il, obra auténtica, como vado el oficio eclesiástico de la mañana y de la tar
la que mas. de, los salmos, los cánticos, las lecciones, la confe
Con efecto, segun los capítulos 20 y 21 de la con sion general de los pecados y la absolucion, la doxo
fesion de la lglesia, no puede decidir ni establecer logia, las aleluyas, el Te Deum , el símbolo de los
nada mas que lo que se enseña en la Escritura san apóstoles, y el de S. Atanasio, las letanias , de las
ta; aun los concilios generales pueden engañarse, y cuales se han suprimido los nombres de lossantos, co
en efecto, se han engañado, y en el plan de religion, mo se ve en el capítulo 12 y siguientes. Administran
1." parte, capítulo 1", se hace profesion de recibir el bautismo, como en la Iglesia romana, mas sin ec
como auténticos, ó como de autoridad, los tres símbo sorcismo ni unciones; sus obispos dan la confirma
los, los cuatro primeros concilios, y los sentimientos cion por la imposicion de manos con una oracion. En
de los Padres de los cinco primeros siglos; en el ca el oficio de difuntos piden á Dios que nos libre de los
¿ ..º se dice que los decretos de estos concilios suplicios eternos, y conceda átodos los fieles la felici
ueron aceptados y confirmados por los estados del dad del cuerpo y la del alma; dicen la súplica Kirie
reino de Inglaterra. Estos estados han aceptado, pues, eleison.
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En la segunda parte de este plan está representado der los testos particulares en el mismo sentido que
el gobierno eclesiástico de Inglatera en diez y seis los entiende la Iglesia, y que sus directores, que tie
tablas. La primera atribuye al rey, la autoridad su nen la autoridad interpretativa, les esplican. Alcan
prema en todas las materias eclesiásticas, y mucho zamos nuestro objeto tambien por este método, como
unayor autoridad que la que nosotros atribuimos al si prohibiéramos la lectura de la Escritura santa... Y
Papa. La segunda y siguientes arreglan la autoridad, aunque por nuestras palabras conservemos á la Es—
las funciones y la jurisdicion de los arzobispos y obis critura santa toda su dignidad, tenemos sin embargo
pos; tambien contienen la cuestion de los beneficios la destreza de substituir realmente nuestras propias
con título y de las diferentes especies de bienes ecle esplicaciones y dogmas sacados de estas esplicaciones
siasticos. etc, ». De tal suerte están ajitadas todas las sectas
La tercera parte establece la disciplina que se re protestantes. Tomás Gordon les dirije la misma acu
fiere á los simples fieles, á las fiestas, los ayunos y la sacion, en el espiritu del clero, p. 2.
abstinencia. Tambien vemos establecida la pascua, En segundo lugar, segun el mismo principio, los
Pentecostes, la Trinidad, todos los domingos, la Cir anglicanos no admiten la tradicion; mas en sus dis—
cºincision de nuestro Señor, la Epifania, la Anuncia pulas con los puritanos y los socinianos, se ven obli
cion, la Ascension, la Natividad, la Festividad de to gados á emplear el testimonio de los Padres ó la tra
dos los Santos, la de los Apóstoles, de los Evanjelis dicion, para manifestar el sentido de los pasajes que
tas, de S. Juan Bautista, de S. Esteban, y la de los enlienden estos sectarios como les place. Un teólogo
Inocentes. Se nos advierte que todos estos dias se con anglicano ha refutado muy bien el libro de Daillé, de
sagran solamente á Dios, como si alguien hubiera en vero usu Patrum. Principalmente por la tradicion es
señado jamás lo contrario. Tambien se conserva la por la que sostienen la institucion divina del episco
cuaresma, los ayunos, las vijilias, la abstinencia de pado, la superioridad de los obispos sobre los simples
los viernes y sábados, las rogativas y las cuatro Tém sacerdotes, el uso apostólico de la cuaresma, etc. Asi,
poras; pero se conoce que los anglicanos no son muy se fundan sobre la tradicion cuando les es favorable:
escrupulosos respecto de todas estas observancias; el la abandonan tan luego como nosotros nos servimos
ejemplo de otras seclas que las desprecian ha preva de ella para probarles los dogmas católicos á que re
lecido sobre la regla. En las catedrales hay lectores, nunciaron.
chantres, vicarios, canónigos, un vice-deán, un te— En tercer lugar lo mismo acontece respecto de la
sorero, un maestre escuela, un primer chantre y un mision y sucesion de pastores. No podeis, se les dice,
dean. Mas los sinodos provinciales nada pueden esta tener esla sucesion y esta mision sino de los pastores
blecer sino bajo la autoridad del rey. de la Iglesia romana; si fueran capaces de trasmití
Asi, conservando cierta esterioridad en religion, y rosla, con mayor razon la hubieran conservado para
desfigurando la doctriua católica, los reformadores sí: los fieles les deben pues la misma docilidad, que
anglicanos deslumbraron la vista del pueblo, y le ar— ecsigis para vosotros mismos, estan pues tan seguros
rastraron al cisma; los enemigos del clero de Ingla— de su salvacion al escuchar á los pastores católicos,
terra no cesan de insultarle con este motivo. como lo están los vuestros escuchándoos á vosotros
Si sostienen por una parte los anglicanos que la Es mismos. Qué necesidad tenian estos de hacer un cis
critura sanla es la única regla de fé, por otra se ma por seguiros? Vosotros decís que la doctrina de
atribuyen el derecho de interpretarla y fijar su verda los pastores católicos es falsa, mas ellos sostienen
dero sentido. «No hay mas diferencia, dijo Ricardo ue lo es la vuestra; el simple fiel debe mas bien creer
Steele á Clemente XI, entre vos y nosotros, en punto ¿ que á vosotros; debe presumir que la mision
á los fundamentos de la doctrina, de la gerarquia, ecsiste mas bien entre ellos, que son el tronco, que no
del culto y de la disciplina, que la de que vos no po— entre vosotros, que no sois sino las ramas, y que la
driais errar en vuestras decisiones, y nosotros jamás verdad reside en el manantial mas bien que en la
erranos; ó en otros términos; que vos sois infalible, corriente que nace de él. Esta es tambien la obje
y nosotros siempre tenemos razón... Asi, el sínodo de cion que les, hace Gordon, pág. 52. Al presente los
Dordrecht, (cuyas decisiones seguras y ciertas se ce incrédulos ingleses dirijen á su clero las mismas
lebran cada tres años en este pas por una fiesta so acusaciones que los reformadores hicieron al de la
lemne en accion de gracias); asi, los sínodos nacio Iglesia romana, cuando le disputaron el derecho de
nales de las Iglesias reformadas en Francia, la asam enseñar, y se separaron de ella.
blea general de laIglesia presbiteriana en Escocia, y En cuarto lugar, Gordon prueba, por las actas
y si me es permitido citar la convocacion del clero de mas solemnes del parlamento de Inglaterra, que la
Inglaterra, todos tienen igualmente esta autoridad in Iglesia anglicana, su constitucion, su clero, todos los
contestable que se atribuye vuestra Iglesia, y los pue poderes y los privilejios de este, son obra de la po
blos están obligados á obedecer sus decretos con lan testad civil, y de ella recibe todo cuanto tiene; que
ta sumision como acontece entre los vuestros, respec todos sus miembros lo han reconocido asi, y se han
to de lo que dimana de la infalibilidad absoluta... Al obligado por juramento á sostenerlo igualmente; que
inismo tiempo que sostenemos con energia, contra estas mismas actas atribuyen al rey todo el poder
vuestros controversistas, que los pueblos tienen de toda la autoridad, tanto eclesiástica como civil, el de
recho de ecsaminar y escoger ellos mismos las Escri recho de reformar y correjir todos los errores, las
turas, tenemos cuidado de inculcarlos en nuestras herejías y los abusos; que en consecuencia, la po
instrucciones particulares, que no deben abusar de testad civil es la ¿ dió la sancion al libro de la li
este derecho, que no deben pretender ser mas sabios túrjia, al ritual la fórmula de ordenacion para
que sus superiores, y que deben dedicarse á enten los ministros de la Iglesia. Dice que en el tiempo de
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la reforma, el arzobispo Craniner confesó que la contra los anglicanos, que el episcopado no subsistía
ordenacion de los obispos no era mas que una insti ya, entre ellos; que Parker jamás fue válidamente
tucion civil, por la cual se llegaba á alcanzar un em ordenado; pues que Barlow, obispo de S. David, y
pleo eclesiástico; ningun miembro del clero anglica despues de Chichester, pretendido consagrador de
no se hubiera alrevido entonces á sostener lo con Parker, tampoco habia sido ordenado él mismo. Mu
trario, todos se vieron obligados á jurar y firmar es chas personas de estas establecieron hechos, de los
ta doctrina, p. 52 y 106; de otro modo, en virtud que resulla que no pudo ser ordenado; algunos lle
del decreto del parlamento de 157, hubieran sido garon hasta el punto de asegurar que Barlow habia
castigados como criminales de lesa majestad. David ordenado á Parker en una posada de Londres. Se
IIume, hist. de la casa de Tudor, en 157; IIeylin,sabe , ademas que, segun la doctrina establecida en
Burnet, elc. aquel tiempo, el título de la reina concedia el poder
Carece pues enteramente de verdad, cuando se di episcopal sin que fuese necesaria la ordenacion.
ce en la confesion de fe anglicana que no se atribuye Para probar lo contrario Le Courrayer sostuvo,
al rey el poder de administrar la palabra de Dios y 1 º que Barlow habia sido realmente consagrado
los sacramentos. Si el rey no tiene este poder cómo obispo, puesto que habia asistido en calidad de tal á
puede darlo? El correjir los errores y las herejías, las asambleas del parlamento, bajo Enrique VIll; mas
aprobar la litúrgia y el ritual, prescribir las fórmu— esto prueba solamente que se presumia su ordena
las de oraciones y ordenacion, no es pues administrar cion. Por otra parte un hombre cualquiera, simple
la palabra de Dios? Tambien es un absurdo el llamar mente nombrado para un obispado, podia asistir al
mision á una institucion puramente civil, y gerarquia parlamento sin haber sido ordenado todavia. 2."Que
ó poder sagrado á un poder emanado de la autori no es cierto que Barlow estuviese ausente en Escocia
dad civil. Los apóstoles manifestaron haber recibido en el tiempo en que se suponia que habia sido ordena
su mision y sus poderes, no de las potestades de la do; que aunque no se pudiese hallar el acta de su
tierra sino de Jesucristo; por la imposicion de ma ordenacion, esta no es mas que una prueba negativa.
nos quisieron dar una gracia y una autoridad espi Mas esta prueba llegó á ser muy positiva, por la
ritual y sobrenatural, y no un empleo civil. S. Pablo afirmacion constante de los que pudieron saber si ha
dice á los obispos, que ellos fueron establecidos, no bia sido ó no consagrado. 3 º Que la pretendida con
por los príncipes ni por los majistrados, sino por el sagracion de Parker en una posada, es una fábula.
Espíritu Santo, para gobernar la lglesia de Dios. Esto puede ser asi; mas el hecho es muy análogo, se
Act., c. 20, y. 28. El poder de perdonar los peca gun el modo de pensar de los autores, que conside
dos, de alar y desatar en el cielo y en la tierra , que ran el orden sagrado de los obispos como una mogi
Jesucristo dió á sus apóstoles, no es ciertamente un ganga. ..." Que Parker fue realmente consagrado en
poder civil. Los teólogos anglicanos llaman con énfa Lambeth en 17 de diciembre de 1559 por Barlow,
sis los derechos dicinos del episcopado, y hacen deri asistido de Juan Scory, electo obispo de llereford,
var estos derechos y esta dignidad de la potestad de Miles Coverdale, antiguo obispo de Exccester, y
real: no son pues estos derechos mas divinos que los de Juan Hoogskins, sufragáneo de Bedford. Se ma—
de un juez, de un oficial militar ó de un empleado de nifestó el acta de esla consagracion.
hacienda; todos estos derechos son de una misma na Mas en el 1727 el Padre Hardouino, y en 1730 el
turaleza, puesto que dimanan del mismo origen. Padre Le Quien, dominico, refutaron á Le Courrayer;
Por tanto el concilio de Trento decidió que los que hicieron ver que la mayor parte de aclas y títulos que
fuesen llamados é instituidos al ministerio eclesiásti—citó en particular el acta de la pretendida ordena
co por el pueblo, por la potestad secular, ó que se cion de Parker en Lambeth, son falsos, supuestos ó
entrometiesen por sí mismos, no son unos verdaderos alterados; que fueron forjados con posterioridad á el
ministros de la Iglesia, sino unos ladrones y surpado año de 1559, para satisfacer á las acusaciones, que
res. Ses. 23, c. . dirigian los católicos á los anglicanos, respecto de la
Si el Padre Courrayer, genovés, refujiado en In nulidad de su episcopado; que le Courrayer, proce
glaterra, hubiera sido mejor informado, no hubiera diendo de mala fé, truncó los pasages de muchos au
emprendido probablemente en 1723 y 1726 el sos tores. Probaron por medio de nuevos testimonios, que
tener la validez de las ordenaciones anglicanas. Esta ni Barlow ni Parker, fueron jamás ordenados obis
cuestion encierra en sí dos, la una de hecho, y la pos; que uno y otro estaban bien persuadidos de que
otra de derecho. La cuestion de hecho es la de sa no tenian necesidad de ordenarse. Le Courrayer no
ber si Mateo Parker, prelendido arzobispo de Cantor— tuvo razon alguna sólida, para replicar contra estos
hery, y origen de todo el episcopado de Inglaterra, testimonios.
recibió ó no el orden episcopal, y por consiguiente Sobre la cuestion de derecho, ó la validez de la
si pudo ó no ordenar válidanmente á otros obispos, ordenacion, prescrita por el ritual de Eduardo VI,
La cuestion de derecho es saber si la forma de or— ha sostenido Le Courrayer que es buena y suficiente:
denacion, prescrita por el ritual anglicano, estableci 1º porque consiste en la imposicion de manos, uni
da bajo ¿ VI, y seguida aun en la actualidad, da á una oracion; 2.º porque alli se hace mencion
es válida ó no. del sacerdocio y del sacrificio, por lo menos indirec
Sobre la primera cuestion es preciso saber que tamente; 3.º que los errores particulares, ya sean del
despues del año de 1559, época de la consumacion consagrador ó del electo, no significan nada para la
del cisma de Inglaterra, bajo la reina Isabel, no so— validez de su ceremonia: ...º que el ordinal ó el ri
lo los ingleses católicos, sino los presbiterianos y los tual de Eduardo Vl fue compuesto por obispcs y
demas no conformistas, sostuvieron constantemente eólogos, y que fue autorizado solo por el rey.
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Para saber á qué debemos atenernos es necesario de Trento y por la Iglesia católica. En efecto, trein
examinar la ceremonia tal como se prescribe por es ta y siete de sus proposiciones fueron condenadas por
te ritual. la asamblea del clero de Francia el 22 de agosto de
1." Se dá principio por la lectura del real des 1727 como falsas, erróneas y heréticas. 7.º Le Cour
pacho, que dice: Nos, nombramos, hacemos, ordena rayer estableció como un hecho, que en la Iglesia
mos, creamos y establecemos á N., obispo de tal silla. griega la ordenacion de los sacerdotes se hace por
2.° Se le hace prestar al electo un juramento conce la sola imposicion de manos, juntamente con la ora
bido en estos términos: Yo atestiguo y declaro sobre cion; y cita para comprobar este aserto el Tratado
mi conciencia que el rey es el solo gobernador su de las ordenaciones del P. Morin, y lo mismo habia
premo de este reino, tanto en lo espiritual ó eclesiás supuesto el P. Hardouino; mas es lo cierto, que entre
tico, como en lo temporal, y que ningun otro prínci los griegos, el obispo sentado ante el altar coloca la
pe ó prelado estrangero tiene jurisdicion alguna, mano sobre la cabeza del ordenando, y le aplica la fren
poder ni autoridad eclesiástica ó espiritual. 3". El te contra el altar, cubierto de vasos llenosdéflores, reci
obispo consagrador pregunta al electo si ha sido lla tando al mismo tiempo la fórmula; asi, la entrega de
mado á la administracion del episcopado segun la los instrumentos se reune con la imposicion de ma
voluntad de Jesucristo y segun las condiciones del nos, y determina la fórmula para designar el doble
reino, y si quiere llenar los deberes propios de su poder del sacerdocio. Tratado acerca de las fór
estado. º Despues de haber respondido el electo, el mas de los sacramentos, por el P. Merlin, jesuita,
consagrador le pone la mano sobre la cabeza, y pro c. 25. Al presente los sábios convienen en que el P.
nuncia esta oracion: «Que Dios Todopoderoso, que os Morin no refirió con la debida exactitud los ritos de
comunicó esta voluntad, os conceda tambien las los orientales. 8.° Antes de ser ordenados obispos Bar.
fuerzas y la facultad de hacer eficazmente todas es low y Parker no eran sacerdotes; luego no se pue
tas cosas, de modo que acabe en vos la obra que de citar en toda la historia eclesiástica ningun ejem
ha comenzado, y que os halle inocente y sin man plo, cierto de semejante ordenacion reconocida como
cha en el último dia, por Jesucristo, Nuestro Señor. válida.
Asi sea.» En 1730, un teólogo luterano en una conclusion
Por consiguiente, se ha sostenido contra Le Cour defendida bajo la presidencia del doctor Mosheim,
rayer, y sostenemos aun, que esta fórmula es nula é examinó de nuevo esta cuestion, tanto sobre el he
insuficiente. 1.° Lejos de hacer meccion alguna ni cho como sobre el derecho. En el primer capítulo ha
directa ni indirectamente del sacrificio ni del sacer ce la historia de la disputa, y de las obras que se han
docio, ha sido hecha espresamente para escluir por escrito tanto en pró como en contra de la validez de
tal medio estas nociones, puesto que el artículo 31 de las ordenaciones anglicanas. En la segunda compara
la confesion de fé anglicana los desecha como una los argumentos alegados por una y otra parte. En la
blasfemia. 2.º Qué pide el consagrador para el ele tercera emite su juicio sobre el fondo y sobre la for—
ido ? Que le conceda Dios la voluntad de llenar los ma. Concíbese bien que se decidió por Le Courrayer;
¿es del episcopado, segun las constituciones del sin embargo, no aprueba todos sus discursos, mas de
reino; en vano se añade segun la voluntad de Jesu muestra el mayor desprecio con respecto á todos sus
cristo, pues que la constitucion del reino, respecto adversarios. Seria inútil detenernos en investigar la
del episcopado, es terminantemente contraria á la historia de los hechos; lo mejor es dedicarnos al fon
voluntad de Jesucristo: lo uno escluye lo otro. 3." do de la cuestion.
No existe una funcion civil por la que no pueda ha En la segunda parte, S, 13, conviene el autor en
cerse la misma súplica en favor de la persona que que el punto principal de la disputa es el de saber si
está establecida en ella, ni tampoco tiene nada de la forma de la ordenacion de los obispos anglicanos es
sagrado ni de sacramental. ..." Los errores particu válida y suficiente; sostiene la opinión afirmativa con
lares del consagrante ó del electo nada significarian los mismos argumentos que Le Courrayer; mas no
para la validez de la ceremonia, si por otra parte no satisface de modo alguno á los que le oponemos. Se
espresase terminantemente estos errores: mas aqui gun los mejores teólogos, dice, el rito esencial de la
están los errores anglicanos terminantemente espre ordenacion episcopal consiste en la imposicion de ma
sados por el real despacho, por el juramento del elec nos y en una oracion; nada mas exige la Escritura
to, por las preguntas del consagrante y por la corres santa: por consiguiente una y otra se hallan en el
pondiente oracion; este es el total de la ceremonia ritual anglicano. Nosotros sostenemos que no es su
que determina el sentido de la fórmula. 5."No se ficiente toda clase de oraciones; que si el sentido de
trata de saber quién compuso el ritual de Eduardo VI, una oracion no es relativo á los fines del sacramento,
sino quién le sancionó, le autorizó y dió fuerza de ley; á los deberes y funciones que unió á él Jesucristo, con
luego, segun la declaracion formal de todo el clero mayor razon si las circunstancias determinan las pa—
de Inglaterra, el rey y el parlamento le dieron la san labras á un sentido contrario, esta forma es absoluta
cion, la autoridad, etc. Los obispos y los teólogos que mente nula. Por tanto, hemos hecho ver que tal es
trabajaron en él eran unos simples comisionados, in la forma anglicana.
capaces de dar á su obra ninguna autoridad; eran Los mismos ingleses conocieron lan claramente
ademas hereges, é hicieron espresamente una profe que era defectuosa la referida fórmula, que en tiem
sion de su heregía. 6.º Los que refutaron á Le Cour— o de Cárlos II la cambiaron. Añadieron tocante á
rayer hicieron ver que, sosteniendo la validez de es os obispos: «Recibid el Espíritu Santo para egercer
ta fórmula, se precipita cualquiera en muchos erro los deberes y las funciones de obispo en la Iglesia de
res groseros y en heregías proscritas por el concilio Dios, y acordaos de renovar la gracia de Dios que se
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os dá por la imposicion de manos»; y á los sacerdo do obispo, como tambien que no se opinó de diferente
tes: Recibid el Espíritu Santo para egercer los deberes modo, aun en la Iglesia romana, tambien se engañó;
y funciones del sacerdocio en la Iglesia de Dios. Reci— la sentencia contraria fue condenada como lo hemos
bid el poder de predicar la palabra de Dios y admi observado en otra parte. V, Obispo.
nistrar los Sacramentos. Los pecados serán perdona Confiesa en el c. 3, S, 16, que el ritual de Eduar—
dos á los que se los perdonáreis, y serán ligados á los do VI recibió del rey toda la sancion y toda la auto
que se los ligáreis.» Ibid., n. 22, 23, 28. Aun cuan ridad que pudo tener; que los obispos y los teólogos
do esta adicion hiciese válida la forma, no tuvo lu encargados de redactarle, no fueron mas que los
ar en la ordenacion de Barlow y de Parker, pues mandatarios y diputados del rey; que no se reconocia
¿ fallecido 80 años antes; unos obispos ordena en lnglaterra otro origen de la autoridad ecle
siástica.
dos sin esta adicion no pudieron ordenar válidamen
te á otros. Por mas que diga el apologista citado que De todo esto resulta, que la Iglesia romana se funda
estas palabras añadidas no constituyen parte de la muy bien al considerar las ordenaciones anglicanas co—
forma, la cual consiste en la oración, los ingleses mo absolutamentenulas, y en ordenarde nuevoálos que
comprendieron que eran necesarias para determinar fueron promovidos al sacerdocio ó al episcopado tan
el sentido de la oracion; luego antes de la adicion el luego como han vuelto á entrar en el seno de la Iglesia.
sentido no estaba bastante declarado; lo mismo acon El mismo autor sostiene contra Le Courrayer, que
tecia respecto á las circunstancias, que significaban si los obispos de Inglaterra son ordenados válidamente,
lo contrario, como lo hemos observado. Que creye-" lambien lo son legítimamente, en cuyo caso tienen
sen ó dejasen de creer que la forma era anteriormen derecho para ejercer sus funciones, á pesar de los
te válida sin esta adicion, nada nos importa: anatemas de la Iglesia romana; no tenemos interés
No es necesario, dice nuestro autor, que la fórmu alguno en examinar cuál de los dos tiene razon. Ve
la esprese, el fin principal y el efecto del sacramento; remos en otro lugar las demas acusaciones que este
la citada fórmula no espresa los electos, etc., en el sa crítico hace contra la doctrina católica: segun lo acos
cramento del bautismo, en el de la confirmacion, es tumbran todos los protestantes, la desfigura con el
tremauncion, ni en el del matrimonio; esto es falso. objeto de creerse con derecho para censurarla; toma
Las palabras yo te bautizo en el nombre del Padre, etc., r doctrina de la Iglesia las opiniones particulares de
significan seguramente, no la purificacion del cuerpo, os teólogos mas desacreditados. Ya hemos dicho que
sino la del alma, que es el principal efecto del bautis la liturgia anglicana se halla en una obra que publicó
mo. En la confirmacion, la fórmula: Yo te señalo con el padre Lebrun; mas ha sido variada lo menos cua—
la señal de la cruz, y te confirmo con el crisma de tro veces antes de arreglarla y ponerla en el estado
salud, etc., espresa muy distintamente el efecto de en que se encuentra al presente. Aunque se haya su
este sacramento. Lo mismo se verifica respecto á la primido todo cuanto pudiera dar una idea de la pre
súplica de la Estremauncion: Por esta santa uncion sencia real de Jesucristo en la Eucaristia y del sacrifi
su gran misericordia, te perdone el Señor los pecados, cio, todavia desagrada mucho á los purianos ó cal
etc. Respecto del matrimonio, la bendicion del sa— vinistas rígidos. -

cerdote dice: yo os uno en matrimonio en el nombre El arzobispo de Cantorbéry, primado de Inglaterra,

del Padre, etc., no es menos espresiva esta fórmula que goza todavia de la misma ¿ y de los mismos
la absolucion en el sacramento de la penitencia: con privilegios de que gozaban los obispos en el siglo tre
mayor razon en la Eucaristia las palabras de Jesu ce; mas el clero anglicano mo ¿
dar ningun de
cristo: Este es mi cuerpo, espresan el efecto de la creto sobre la doctrina, las costumbres, ni sobre la
consagracion. disciplina, sin una comision especial del rey, y sus
Le Courrayer engañóá sus lectores, cuando les di decrelos no tienen fuerza hasta tanto que son confir
jo que los anglicanos no desechaban absolutamente la mados por la autoridad real. Las funciones de los obis.
nocion del sacrificio en la Eucaristia, que admiten al pos son las de predicar, de confirmar y conferir las
menos un sacrificio conmemorativo y representativo, órdenes; las de los rectores de parroquia ó de los cu
y que entre ellos y los teólogos católicos no mediaba ras, son las de predicar, bautizar, casar, y enter
otra cosa que una simple cuestion de palabras; que rar á los muertos. Las tres últimas funciones se pagan
la nocion del sacrificio no se funda sobre el dogma de muy caras, y todos los ingleses, sin distincion de reli
la presencia real. Ibid., S. 27. Su apologista, hombre gion, están sujetos á ellas; pero en general el clero
mas sincero, conviene, c. 3, S. 19, en que un sacri es muy poco respetado en Inglaterra.
ficio conmemorativo y representativo en el sentido Vista la indiferencia que afectan los anglicanos por
anglicano, no es sino una sombra ó una figura de sa el dogma, ninguno debe sorprenderse del poco celo
crificio, que no lo entendió asi el concilio de Trento. ¿ manifiestan por la conversion de los infieles, ri
En efecto, este concilio fundó evidentemente la no— iculizando frecuentemente el de nuestros mismos
cion del sacrificio sobre el dogma de la presencia misioneros. La religion no les parece ser un negocio
real. Ses. 22, c. 1.º y 2.° En ¿ EUCARISTIA, de mucha importancia, y por eso han sido tan alaba
S. 5, haremos ver que esta nocion no pudo fundar— dos por nuestros filósofos, y la mayor parte de sus
se de otra manera. Esta es una de las principales ra teólogos han pasado del arrianismo á las opiniones de
zones que atrajeron sobre Le Courrayer su condena los socinianos. V. PUsEYsmo.
cion pronunciada por el clero de Francia, y que fue <<S". La Iglesia anglicana se declaró en cisma
aprobada por el soberano Pontífice. con toda la cristiandad: bajo el doble reinado político
Cuando añade este crítico que no es necesario que y religioso de ¿ VIII, hubo de resistir los ata
un hombre sea sacerdote para que pueda ser ordena— ques que asi católicos como protestantes dirigian
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contra su gefe; y como todas las reformas que afec— Esto prueba solamente que el rey de la naturaleza
tan á la constitucion civil y religiosa de los paises, la encuentra algunas veces rebeldes entre sus súbditos;
de Inglaterra trastornó y sumió en un caos anárqui mas no se sigue de aqui que su dominacion sea injus
co cuanto allí habia respetable y magnífico. Induda ta ó quimérica: para cada marinero que traguen los
blemente el reinado de Enrique VIII fue de muerte y tiburones, hay mil tiburones pescados con el arpon
desolacion para la Inglaterra, como no podia menos por los hombres; para cada egipcio devorado por los
de serlo cuando se estableció aquel Estado—Iglesia, ó cocodrilos, hay mas de mil cocodrilos destripados por
Iglesia-Estado, en que el gefe podia llamarse bicipi los egipcios. El dominio del hombre sobre los anima
te. Constituida en cuerpo político la Iglesia anglicana, les no es ilimitado ni está exento de las reglas de la
y estableciendo por gefe á su rey, daba este sus de rudencia; cuandoles faltan las fuerzas las suple la in
cisiones dogmáticas, y arreglaba la doctrina inde— ¿ , y le hace en fin ser el superior. La ferocidad
pendientemente, y contra lo que la Iglesia católica te de muchos animales es una de las razones que obligan
nia establecido, hasta el estremo de que el ministro á los hombres á reunirse y á vivir en sociedad.
Jurieu convenció al anglicanismo de haber cambiado Otros pretendieron con poco fundamento que la
las máximas de su religion, respecto de la obedien Escritura Santa parece atribuir á los animales inte—
cia debida á las potestades; y cuenta que Mr. Ju ligencia, releccion, y colocarlos al nivel del hombre.
rieu era en este punto el Rousseau de aquella épo— Dios dijo á Noé y á sus hijos: Gén., c. 9, y . 5. «Yo
ca, y á quien el filósofo ginebrino debe el triste reco tomaré venganza de vuestra sangre sobre cualquiera
nocimiento de sus paradojas político-sociales. Sobre de los animales que la derrame, y la muerte de un
lo que parece asegurar el respetable Bergier al prin hombre la vengaré en el hombre que la hubiere der
cipio de este artículo acerca de Enrique VIll ,léase ramado»; y.9. «Yo voy á establecer alianza con vos
el libro 7.º, párrafos 28 y 29 de la Historia de las va otros y con los animales». Mas el y 5 está mas ter
riaciones, escrita por Bossuet. minante en el testo samaritano, donde dice: Yo re
clamaré vuestra sangre de la mano de todo viviente,
Anillo. Adorno de los obispos para denotar la de todo hombre, etc». No se trata aqui de los anima
íntima alianza que han contraido con la Iglesia en vir les. Se sabe que en la Sagrada Escritura, la palabra
tud de su ordenacion, y la adhecion y afecto que la alianza significa frecuentemente una simple prome
deben, etc. Véase el antiguo sacramentario por sa; Dios promete en el y.9 y sig., no volverá des—
Grandeolas, 1.° part., pág. 19. truirá los hombres, ni á los animales por medio de un
diluvio universal. A esto se limita esta alianza.
Animales. Cuando crió Dios al hombre le di En verdad, la mayor parte de los pueblos estu—
jo; domina á los peces del mar, y á las aves del cielo, vieron en la falsa persuacion de que los animales
y á todos los animales que se mueven sobre la tier tienen un alma intelectual y racional, y que aun tie
ra». Gén. c. 1, y.28. Lo mismo repitió á Noé despues nen mas prevision y sagacidad que el hombre, y que
del diluvio: «que teman y tiemblen á tu presencia to— conocen el porvenir; muchos filósofos tuvieron esta
dos los animales de la tierra, c. 9, y. 2. El Salmista misma opinion. Celso sostuvo con mucha formalidad
bendijo á Dios por haber dado al hombre este dominio que los animales tienen mas razon, mas sabiduria,
sobre todos los animales. Salm. 8, y. 8. Los filóso— mas virtud que el hombre, y una comunicacion mas
fos que observaron la naturaleza con recta intencion, íntima con la Divinidad. Véase la obra que escribió
nos hacen notar que esta orden del Criador se ejecuta Celso sobre Orígenes, lib., , n.88. De aqui provino
sobre toda la faz del globo. El mayor número de ani el culto que tributaban los egipcios á muchas especies
males son dóciles, se costumbran fácilmente á ser ma de animales.
nejados por el hombre, parece que buscan frecuente— Mas los adoradores del verdadero Dios jamás adop
mente su compañia, é imploran su proteccion: los taron este error, y la Escritura Sagrada tampoco ha
demas huyen ante él, no le atacan, á menos que cier dado ocasion á ello; antes bien pone una diferencia
tas necesidades estremas no los saquen, por decirlo muy notable entre el hombre y los animales para
asi, fuera de su natural. El elefante, tan monstruoso que nadie pudiera engañarse. V. ALMA. Como la Sa
como es, se deja sin embargo conducir por un niño; grada Escritura nos ha ilustrado por medio de la re
el leon se aleja de todos los sitios habitados por los velacion, nos parece que nada por sí es tan facil co
hombres, y la corpulenta ballena enmedio de su ele mo el prevenir toda ilusion sobre este punto esencial;
mento tiembla y huye ante la pequeña canoa de un mas en fin los filósofos no eran estúpidos, y sin em
ºp. Estud. de la Nat., t. 2, p. 239. bargo pensaron como el pueblo y como opinan aun
l oso no acomete jamás al que va de paso, á me al presente los negros y los salvajes. No debemospues
nos que no sea provocado, ó que no tenia por sus hi atribuirá una superioridad de razon natural las re
jos; y si los desiertos de Barca pudieran ser habitados flexiones que hacemos sobre este objeto, y por las
por hombres, los leones no permanecerian allí largo cuales demostramos la diferencia infinita que existe
tiempo. Mas nuestros filósofos incrédulos nos oponen entre los hombres y los brutos. - -

muy sériamente, que este pretendido imperio del Los egipcios tributaban un cultoreligioso á muchas
hombre sobre los animales es quimérico: el tiburon especies de animales, porque los suponian animados
dicen, traga al marinero que tiembla á su vista, el por un Dios, por un genió bienhechor, ó por un es
cocodrilo devora al vil egipcio que le adora, toda la píritu formidable; les consultaban para conocer el
naturaleza insulta á la magestad del hombre. Los ma porvenir. Los griegos consagraban á los dioses cier
niqueos hicieron anteriormente esta objecion. Véase ios animales, por razones estravagantes. Los roma
á S. Agustin, lib. 1.° de Gén., c. 18. nos no emprendianninguna espedicion sin haber con
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sultado el vuelo de las aves. Mientras que entregaban año se usaba rogar á Dios por las almas de nuestros
los hombres achacosos á los animales que les habian parientes y anmigos difuntos.
prestado buenos servicios, hacian por via de diver En este último sentido, el aniversario es el dia en
sion combatirá hombres contra animales feroces, y que de año en año se recuerda la memoria de un di
se gozaban de ver la vida tan desgraciada de algunos funto, rogando á Dios por el descanso de su alma.
esclavos. Tal fue la demencia de unos pueblos que han Algunos autores refieren el primer origen de estos
sido considerados como los mas sabios. aniversarios al papa Anacletó, y despues, á Felix 1,
los cuales establecieron aniversarios para honrar con
ANIMALES PUROSE IMPUROS. De dónde ha na solemnidad la memoria de los mártires. Despues mu
cido esta distincion? Es tan antigua como el mundo, chos particulares ordenaban en sus testamentos á sus
pues que se halla ya observada por Noé en la elec herederos que mandasen celebrar los aniversarios,
cion que hizo de los animales que debian entrar en y ¿? fondos tanto para el gasto y conservacion
el arca. Gén., c. 7, y. 2. En los climas mas cáli de agunas iglesias como para el alivió de los pobres,
dos que el nuestro, el uso muy frecuente ó escesivo á los que se distribuia todos los años en este dia dine
de la carne de los animales causa infaliblemente en— ro y víveres. El pan y el vino se lleva aun al presen
fermedades, y hay tambien muchos climas en don te para la ofrenda en estos aniversarios, pueden ser
de es preciso abstenerse enteramente de esta clase de vestigios de estas distribuciones. Tambien se llama
alimentos. Como los hombres han ofrecido en todo á los aniversarios óbitos y oficios.
tiempo á Dios los alimentos con que se nutrian, juz—
garon no convenia ofrecer la Divinidad unas Anoméos ó desemejantes. Se dió este nombre
carnes de que no podian usar, y á las que tenian cier en el cuarto siglo á los puros arrianos, porque ense
la repugnancia. Los animales escluidos de las ofren ñaban que Dios hijo era desemejante, ANoMoyoN, á su
das y sacrificios fueron pues reputados como impuros, Padre en esencia y en todo lo demas. Se les dió ade
y como indignos de ser ofrecidos á Dios. Sin embar—mas diferentes nombres, como aecianos y eumomia
go, Moises no solamente se fundó sobre este conoci nos, &., á causa de sus gefes Aecio y Eunomio. Se
miento para designar las víctimas de que los judios oponian á los semi-arrianos, quienes en verdad ne
podian usar, y cuya carne podian comer, sino que gaban la consubstancialidad del Verbo con el Padre,
ademas fue inspirado por Dios para intimarles este mas le atribuian una semejanza en todo con el Padre.
precepto. No hubo en esto ni supersticion ni alusion á V. ARRIANos, sEMI-ARRIANOs.
ninguna fábula. Si con el tiempo las naciones idóla Estas variaciones contribuyeron á que se impug
tras imaginaron falsas razones para esta distincion, nasen estos hereges entre sí con no menos furor que
esto en nada deroga la sabiduria del legislador de los lo habian verificado contra los católicos; pues los
judios. Es bien notoria la esactitud con que los sacer semi-arrianos condenaron á los anomeos en el con
dotes egipcios habian arreglado el régimen dietético cilio de Seleucia, y los anomeos condenaron lambien
que debia ser observado por el pueblo , á pesar de á su vez á los semi-arrianos en los concilios de Cons
cualesquiera inconvenientes que resultasen de la fal tantinopla y de Antioquia, y borraron la voz AMo
la de limpieza, de la pereza y de la voracidad de los yousyo de la fórmula dé Rímini y de la de Antioquia,
egipcios mahometanos. protestando que el Verbo tenia no solo una substancia
La mayor parte de los animales que habia ordena diferente sino tambien una voluntad diferente de la del
do Moises inmolar en sacrificio eran reverenciados Padre. Sócrates, lib. 2; Sozomeno, lib.; Teodo
por los egipcios con un culto supersticioso. Spencer reto, lib. .
De legib. heb. ritual, lib. 2, c., sect. 1.º Por esto
es por lo que cuando dijo Faraon á Moises: «Ofreced, Anonnianos. V. ANTINoMuANos.
siquereis, sacrificios á Dios aqui en este pais; Moi
ses le respondió: esto no es posible; nuestros sacri Anotína, pascua anotina. Asi se titulaba el ani
icios serían una abominacion á los ojos de los egip versario del bautismo ó fiesta que se celebraba todos
cios, y nos apedrearian si nos viesen inmolar los ani los años en memoria de su bautismo, ó segun otros,
males que ellos adoran». Escod. c. 8, y. 25. el cabo de años en que se habian bautizado. Todos los
Cuando se estableció el Evangelio, llegó á ser en - que habian recibido el bautismo el mismo año se reu.
teramente inutil la distincion de los animales puros é nian, dicen, al finalizar este año, y celebraban el
impuros; los sacrificios sangrientos fueron abolidos aniversario de su regeneracion espiritual.
por Jesucristo, y las naciones estaban ya bastante ci
vilizadas para no tener necesidad de que las prohi Anselmo (San), arzobispo de Cantorbery, que
biera por medio de la religion los alimentos mal sa falleció el año de 1109, y se cuenta entre los doctores
nos. Como el cristianismo está destinado para todos de la Iglesia. Han quedado de estesanto muchas obras
los pueblos y climas, las instituciones locales nada in de teologia y de piedad, de las que el padre Gerberon,
fluyen en él. Cuando la Iglesia prohibe comer de car benedictino, ¿ una escelente edicion en folio.
ne, no lo hace como un régimen de salud, sino por Fue este santo muy instruido y mejor escritor que lo
mortificacion. V. ABSTINENCIA. que se podia esperar de su época.
Mosheim conviene en que sobresalió en la dialéc
Aniversarios (los). Dias aniversarios, entre tica, la metafísica y la teologia natural; en que es el
nuestros antepasados eran los dias en que se cele autor del argumento, cuya invencion se atribuye fal
braban en la Iglesia los martirios de los santos anual samente á Descartes, á saber, el de la demostracion
mente, como tambien los dias en que á cada fin de de la existencia de Dios, sacada de la idea innata que
 ANT (113 ANT
lenemos todos los hombres de un ser infinilamente Antecristo Este término está compuesto de la
perfecto. Añade que este santo arzobispo y Lanfranc preposicion griega ANTy contra , y de Jaystos
su predecesor y maestro, son los verdaderos fundado Christus. Significa en general un enemigo de Jesu
res de la teología escolástica, pero que la trataron cristo, un hombre que niega que haya venido Jesu
con mas sabiduría, con mas discernimiento y solidéz cristo, y que sea el Mesias prometido. Esta es la no
que sus sucesores. Finalmente, dice que San Anselmo cion que dá S.Juan en su primera Epístola, c. 2. En
fué el mejor moralista de su tiempo; que fue él pri este sentido se puede decir de los judios é infieles que
mero que dió un sistema general ó un cuerpo comple son antecristos.
to de teologia, mas que esta obra fue superada por la Por antecristo se entiende mas comunmente un ti
ue compuso al fin de este siglo Hildeberto, arzobispo rano impío y escesivamente cruel, el cual debe reinar
Tours. Hist. eccles, del siglo undécimo, 2.° part. sobre la tierra cuando el mundo toque á su fin. Las
c. 1. S.7; c. 3. S. 5 y 6. ersecuciones que ejercerá contra los escogidos serán
Se confirmó este elogio con el voto del traductor in a última y mas terrible prueba que tendrán que su
glés de Mosheim, y por Bruker, Hist de la filos. t. 3, frir. Segun la opinion de muchos comentadores, el
p. 66. No acostumbran los protestantes hablar tan mismo Jesucristo ha predicho que los escogidos su—
ventajosamente de los Padres de la Iglesia. Existe una cumbirian, si el tiempo de tan terrible prueba no se
buena noticia de algunas obras de San Anselmo en abreviase en su favor; por medio de este azote anun
las Vidas de los Padres y de los mártires, 21 de ciará Dios el juicio último y la venganza que debe
Abril. tomar de los malvados. -

La Escritura y los santos Padres hablan del ante

Antecedente. Este término se usa en teolo cristo como de un solo hombre, al que, en verdad, dan
gía, donde se dice, al hablar de Dios, decreto antece Ull ¿ número de precursores, Segun S. Ireneo, S.
dente, voluntad antecedente. Ambrosio, S., Agustin y casi todos los demas Padres,
Un decreto antecedente es aqnel precede ó á el antecristo debe ser, no un hombre engendrado por
otro decreto, ó á alguna accion de la criatura, ó la un demonio, como pretendió S.Gerónimo, ni un de
prevision misma de esta accion. monio revestido de una carne aparente y fantástica,
Los teólogos están muy divididos en punto á saber menos todavia un demonio encarnado como opinaron
si la predestinacion á la gloria es un decreto antece otros, sino un hombre de la misma naturaleza y con
dente ó subsiguiente á la prevision de la fé y méritos de cebido del mismo modo que los demas, que en nada
los que son llamados, esta es una opinion que se agita se diferenciará de ellos mas que por una malicia y
libremente en pro y en contra en las académias cató una impiedad mas digna de un demonio que de un
licas, y ambas á dos opiniones se fundan en autori hombre. Como los rasgos del cuadro que trazaron no
dades y razones muy fuertes. V. PREDESTINAcioN. son mas quo congeturas y no tienen ningun funda
Voluntad antecedente, en un sentido general, es la mento sólido, es enteramente inútil detenernos mas
que precede á alguna otra voluntad, deseo ó previ en este punto.
sion. Se dice que hay en Dios una voluntad antece Es bien notorio que muchos escritores protestantes
dente de salvará todos loshombres; mas, consiguiente han tenido por conveniente aplicar al Papa y á la
á la prevision de los crímenes de muchos no quiere ya Iglesia romaña todo cuanto dice la sagrada Escritura,
salvarlos, sino condenarlos. y sobre todo el ¿ , respecto al antecristo.
Se disputa con mucho calor en las escuelas sobre Lo absurdo de la tal idea no ha obstado para que los
la naturaleza de esta voluntad: unos pretenden que no protestantes del último siglo la adoptasen como un
es mas que una voluntad de signo, una voluntad me artículo de fé en su decimoséptimo sínodo nacional,
tafórica, ineficaz, un simple deseo que nunca llega á celebrado en Gap en 1603. Su afectacion llegó hasta
tener efecto; otros, mejor fundados, sostienen que es el punto de publicar que Clemente VIII, que falleció
una voluntad de beneplácito, voluntad síncera y real, poco tiempo despues, habia muerto de resultas de el
que no es privada de su último efecto sino por culpa disgusto que le causó esta decision; mas este Pontífice,
de los hombres, que no usan ó que usan mal de los lo mismo que el rey Enrique IV, á quienes habian
medios que Dios les concede para alcanzar su salva declarado en pleno sinodo linage del antecristo, no
cion. Se prueba pues esta voluntad por su inmediato opusieron á sus escesos mas que la moderacion, el
efecto, que es el de conceder gracias. V. GRACIA, S. 3: desprecio y el silencio.
SALVACION. Á pesar de que el sabio Grocio y el doctor Ham
Uonviene observar que este término antecedente no mond se dedicaron á destruir estos desvaríos, se ha
se aplica á Dios sino con relacion á nuestro modo de visto hácia fines del siglo último, á José Mede en In
entender. En efecto, Dios vé y provee al mismo tiem ¿ y al ministro Jurieu en Holanda, resentarlos
po y sin diversidad en el modo, tanto el objeto de su ajo una nueva forma sin que ellos por esto hayan podi
prevision, como las circunstancias inseparables de do acreditar mas. Los católicos demostraron el fana
este objeto; por tanto vé á un mismo tiempo todo lo tismo de las aplicaciones del Apocalipsis, con las que
que vé, sin sucesion y sin inconstancia, lo que no im se esforzaban estos escritores en manifestar que el an
ide que Dios pueda ver esto con ocasion de aquello, tecristo debia aparecer y salir de la lglesia romana há
ó que no pueda tener un deseo á causa de tal previ cia el año 1710. Se puede consultar sobre esta mate
sion. Esto es lo que llaman los teólogos órden ó prio ria la Hist. de las variaciones; escrita por M. Bossuet,
ridad de naturaleza, prioritas naturae, en oposicion t. 2, lib. 13, desde el artículo 2.” hasia el fin del mis
al orden ó á la prioridad de tiempo, prioritas tem mo libro.
porus. -
Es sensible que esta idea estravagante de los pro -
 ANT 11%) ANT
testantes haya sido consagrada en Ginebra por medio cer. El autor pretende qne será judio y de la tribu de
de una inscripcion que mueve á compasion á los via Dan, y se funda en la autoridad de algunos Padres,
jeros sensatos. sobre el y 17 del capítulo 9 del Génesis, en el que se
Para ocultar lo absurdo de semejante idea han di ee, que hallándose Jacob prócsimo á morir, dijo á sus
cho algunos protestantes, que cuando sostienen que hijos «Dan es una serpiente en el camino, y un aspid
el Papa es el antecristo, no quieren dar á entender en la senda»; y sobre el capítulo 8, y 16 de Jeremias,
que hablan de su persona sino de su autoridad; que en donde se dice que los egércitos de Dan, devora—
lo que aseguran , es solamente que su dominio es un rán la tierra; y además sobre el cápitulo 7 del Apo—
reinado anticristiano, ó contrario al espíritu del cris calipsis, en que S. Juan omitió la tribu de Dan, en la
tianismo. Mas previeron las consecuencias de esta enumeracion que hizo de las demás. Trata en el cuar
misma pretension? Jesucristo habia prometido á su to y quinto, de los caracteres del antecristo. En el
Iglesia que estaría con ella hasta la consumacion de sesto habla de su reinado y de sus guerras; en el sép
los siglos, y que las puertas del infierno no prevalece timo de sus vicios; en el octavo, de su doctrina y de
rian contra ¿ ha cumplido tan mal su palabra, sus milagros; en el nono de sus persecuciones; y en
que por el espacio de mas de mil años, segun el cál lo restante de la obra, de la venida de Enoch y Elias,
culo de los mismos protestantes, esta Iglesia ha reco de la conversion de los judios, del reinado de Jesu
nocido por su pastor legítimo y por vicario de Jesu cristo y muerte del antecristo, la que acaecerá des
cristo á un personage anticristiano, y le ha atribuido pues de haber reinado tres años y medio. No falta á
constantemente una autoridad anticristiana? así que, todas estas bellas cosas mas que pruebas y buen sen
el reino de Jesucristo ha llegado á ser un reino an tido. Los que gustasen tomarse el trabajo de leer la
ticristiano. larga disertacion sobre el antecristo, que se halla en
Esto es lo mismo que sise dijese que no hubo verda la Biblia de Aviñon, t. 16, p.39. no saldrán tampoco
dero cristianismo en la tierra desde el quinto siglo mejor instruidos.
hasta el décimo sesto, y que el anticristianismo há
bia ocupado su lugar. Tambien seria preciso suponer <2 =S" Hablando Lutero de la ruina prócsima del
que este anticristianismo tuvo principio inmediata Pontificado, aseguró que constaba de la Escritura ha
mente despues de la muerte de los apóstoles. Si el re ber dos antecristos, el Papa y el gran Turco; predijo
trato que los protestantes han hecho de los pastores que el pontificado estaba ya por tierra, que apenas le
de la Iglesia en todoslos siglos fuera esacto, nos pa restaban dos años de vida; y que los esfuerzos que á
rece que de todas las opiniones que ha habido sobre la sazon hacia el Turco en Hungria, eran el último
este asunto, no hay ninguna mas anticristiana que acto de la tragedia. En el sínodo de Gap, celebrado
la suya. en 1603, se ¿ como artículo de fé, que el Papa
Se encuentra entre los escritos de Rabano y Mauro, era el Antecristo; y llegó á tal estremo la importan
primero abad de Fulda, despues arzobispo de Magun. cia fanática que se dióá este artículo, que debia ser el
cia, autor muy célebre del siglo nono, un tratado so XXXI, porque en el XXX se enseñaba que todos los
bre la vida y las costumbres del antecristo. No cita obispos eran iguales. Por manera que el Papa es ca
remos mas que un pasage singular, y es aquel en racterizado de Antecristo ser superior á los demás
que el autor, despues de haber probado, con la auto obispos. «Si asies, dice el ilustre Bossuel, hace mu
ridad de S. Pablo, que la ruina total del imperio ro «chó que reina el Antecristo, y no sé porqué la refor
mano, ¿ supone ser el de Alemania, precederá á la «ma ha procedido con esa lentitud en colocar entre
venida del antecristo, concuye de esta suerte: «tanto número de antecristos como ha introducido, á
«Este término fatal para el imperio romano, no ha «S, Inocencio, S. Leon, S. Gregorio, y los demás
llegado todavia. Es verdad que le vemos al presente «Papas, s cartas nos hacen ver á cada página el
estremadamente disminuido, y por decirlo así, des «egercicio de esta superioridad»..... «Pero, conti
truido en su mas grande estension; mas es cierto que «nua el célebre y elocuente obispo, cuál de todos los
su esplendor no se eclipsará jamás enteramente; por «Papas es aquel malvado y hombre de pecado que de
que mientras que los reyes de Francia que deben ocu «signa S. Pablo. Semejantes espresiones no se ven en
el trono del imperio romano subsistan, siempre «la Escritura mas que para caracterizará alguna per
e prestarán un firme apoyo. Algunos de nuestros «sona particular. No importa ; son todos los Papas
doctores aseguran que ha de ser uno de los reyes de «desde S. Gregorio, como se decia en otro tiempo y
Francia, el que al fin del mundo dominará sobre to «como se repite ahora, son todos los Papas desde San
do el imperio romano. «Leon el hombre de pecado, el hombre malo, y el An
No parece pues que muestros reyes hayan jamás «tecristo; aunque hayan convertido al cristianismo la
contado con esta prediccion. ««Inglaterra, la Alemania, la Suecia, Dinamarca y
Malvenda, teólogo español, publicó una obra «Holanda; aunque todos estos paises al abrazar la
larga y sabia acerca de antecristo. Su tratado es «reforma reconociesen públicamente que recibieron
tá idido en trece libros. Espone en el primero las «el cristianismo del mismo Antecristo». El sínodo ci
diferentes opiniones de los Padres, respecto del an tado asegura que tal es la opinion de toda la reforma
tecristo. Designa en el segundo el tiempo en que debe á saber: que d Papa es el Antecristo. No es pues de
aparecer, y prueba que todos los que aseguraron que admirar que los protestantes de buena fé empiecen á
la venida de estaba próxima, han supues— formar simpatias hácia la Iglesia católica, apenas dan
to igualmente que el fin del mundo tampoco estaba un paso en el estudio imparcial de la historia eclesiás
distante. El tercero es una disertacion sobre el origen tica de dos siglos á esta parte: ni que muchos sean
del antecristo, y sobre la nacion á que debe pertene como llamados á su conversion, prévio elconocimien
 ANT 115) ANT
to de los falsos apóstoles que hicieron á sus padres se saba de un modo tan esencial; y puede dicha carta
rebelasen contra la autoridad del vicario de Jesucris considerarse como una declaracion comun por parte
to, quien apesarde la profecía de los dos años, hecha por de los prelados no dimisionarios.
el fraile apóstata, sigue representando á Jesucristo «Mas M. Picot, hace observar si era de facil egecu—
hace dos siglos desde el anuncio blasfemo de Lutero, y cion la proposicion de consultar y entender iodos los
continuará siempre rigiendo y gobernando la Iglesia obispos en un tiempo de revoluciones é incertidum—
universal. bres, en que no se gozaba de la tranquilidad sufi
ciente para la reunion de un concilio? Y la necesi
Antldiluvianos, hombres que vivieron antes dad de estinguir tan largo cisma y hacer cesar una
del diluvio. La Escritura nos los representa como una persecucion declarada, (véase constitucion civil del
raza de impíos y hombres perversos; dice que su ma clero); de sacar á la religion de sus ruinas y hacerla
licia era estremada, y que todos sus pensamientos volver al corazon de los fieles, que la olvidaban cada
se dirigian hácia el a. que toda carne habia corrom vez mas en medio de las tempestades y embarazos
pido sucamino: «Diosdice, añade lavulgata» miespíritu en que gemia despues de mas de diez años, no auto
10 ¿ con el hombre para siempre, porque se rizaban al Papa para desentenderse de las reglas or—
ha hecho carnal; yo no le dejare vivir mas que ciento dinarias y para desplegar un poder proporcionado á
veinte años». Gén. c. 6, y. 3. A este propósito hace la magnitud de los males que aquejaban á la Iglesia?
S. Gerónimo una observacion notable. «Tambien se Por lo demas, los prelados no dimisionarios ¿?
lee, segun el hebreo, mi espíritu no juzgará á estos raron en su mayor número, que á fin de no causar
hombres por toda la eternidad, ¿ son de carne; divisiones, consentian en el egercicio de las funciones
esto es, yo no los destinaré á los castigos eternos, del nuevo obispo. Aun muchos de estos anunciaron
porque la naturaleza del hombre es fragil; mas yo los que suplirian la insuficencia de su título, sin aban
castigaré segun lo merecen. Así este versículo no es donar la jurisdicion.
presa la severidad de Dios como en nuestras versiones, De Londres llegaron á Roma unas representacio
sino su clemencia; cuando el pecador es castigado en nes firmadas en muchas ciudades de Europa por es
este mundo por sus crímenes» In Gén., c. 6. En los prelados, y redactadas con fecha del 6 de Abril
efecto, el testo hebreo y el samaritano traen lite de 1803, bajo el título de Earpostulaciones canónicas,
ralmente el sentido que vió allí S. Gerónimo. De aqui etc. sobre diversos actos relativos á la Iglesia de Frun
infirieron los santos Padres que por el diluvio castigó cia. En ellas se formaba una al concordato
Dios á los pecadores de esté mundo, para usar con del 15 de Julio de 1801; á la bula Eclesia Christi,
ellos de misericordia en el otro. Orígenes, Hom, 1 in del 15 de Agosto; al breve Tam multa, del mismo
Ezech., n. 2.; Tertul. L. de Bapt., c. 8; S. Juan Cri dia; á la bula Qui Christi Domini, del 29 de Noviem
sóstomo, in Ps. 110, n. 3; S.Gerónimo, Epist. ad bre, la cual establece una nueva circunscricion, á
Occean., tom. , 2". part. p. 650; S. Agustin, in Ps. las letras ó instrucciones Quoniam favente, que con
58, serm. 2. n. 6; serm. 171, de verbis apost. n. 5 etc. cedieron al cardenal Caprara la facultad de instituir
presumieron que como el diluvio no se verificó de re nuevos obispos; y á los dos decretos Qua praecipue
pente y en un solo instante, sino poco á poco, tuvie et cum sanctíssimus, espedidos por este legado en
ron tiempo los pecadores de pedir perdón á Dios, y Paris, el 9 de Abril de 1802, se reservaron esponer
que se sirvió el Señor del temor que tenian de la posteriormente otras quejas á que daban lugar las
muerte para inspirarles el arrepentimiento. estipulaciones del concordalo... . .
n efecto, los obispos no dimisionarios que resi
Antiadiaforistas, esto es, opuestos álos adía dian en Iglaterra firmaron en 1804 á nombre de
foristasó indiferentes. V. ADIAronistas. trece, dos escritos concebidos en un lenguage aun
En el siglo diez y seis se dió este nombre á una mas animado que las Earpostulaciones á saber: el 8
secta de luteranos rígidos, que rehusaban reconocer de Abril una Declaracion acerca de los derechos del
la jurisdicion de los obispos, y desaprobaban muchas rey, y el 15 del mismo unas Nuevas reclamaciones
ceremonias de la Iglesia, observadas por los luteranos canónicas que tenian por objeto: 1.” muchos artículos
moderados. V. LU reRANos. del ¿ relativos al reconocimiento del nuevo
¿ y á los bienes eclesiásticos; 2.” los artícu
º, Antheomeordatario. Habiéndose con— os llamados orgánicos; 3. º muchas disposiciones del
cluido un concordato entre la santa Sede y el gobier nuevo código civil. Mas el mismo Pio VII reclamó
no francés, Pio VII, dirigió el dia 15 de Agosto de contra los artículos orgánicos, (V. esta roz.) y contra
1804 á los obispos de Francia el breve Tam multa, diversas medidas desventajosas para la religion.
en el que les declaraba que la conservacion de la uni Ademas de estos trece obispos no quedaron en In
dad y el restablecimiento de la religion católica en glaterra de todo el clero emigrado ó deportado mas
su patria demandaban que hicieran dimision de que cuatrocientos sacerdotes á lo mas; los cuales no
sus sillas. intentaron tomar parte en el nuevo orden de cosas, y
Cierto número de estos obispos dirigieron al Papa levantaron muchos de ellos públicamente el estandar
una respuesta dilatoria mas bien que negativa; mas te del cisma. (V. BLANCHARDismo). Los prelados re fu
otros muchos rehusaron dimitir. giados no censuraron sus escritos por medio de un
Aselino, obispo de Bolonia, redactó una carta que acto público, suponiendo que la violencia de estos ar
fue remitida al soberano pontífice el 26 de Marzo de rebatos neutralizaria su peligro pero los reprobaron,
1802, en la que insistió de nuevo sobre la necesidad Despues de la restauracion, Luis XVIIl que se ocu
de entender los obispos en una causa que les intere— paba en arreglar un tratado con la santa Sede, escri
 ANT 116) ANT
bió á los obispos no dimisionarios el 12 de Noviem en la que se firma Alejandro, obispo de Blois, y en
bre de 1815, diciéndoles que la negativa de su dimi donde dice: «El siglo está muy gastado para no dar—
sion parecia oponerse á la feliz consecucion de las ne le mas que una ceremonia y un espectáculo, sin pre
gociaciones, y les invitaba á quitar este obstáculo. liminar y sin continuacion. El Dios de Clodoveo, de
El número de estos prelados que se hallaban en Paris Carlo Magno y de S. Luis es el Dios de S. Remigio,
le dirijieron con efecto una fórmula de dimision, en de todos los apóstoles de las Galias y de sus suceso
donde se espresaba que debia de permanecer esta acta res legítimos. Tambien el gran santo dijo en el bau
en poder del rey, hasta que se conociese el resulta tismo de Clodoveo: Bajad la cabeza, arrogante Sicam
do de la negociacion. Los que se hallaban todavia en bro, adorad lo que habeis quemado, y quemad lo que
Inglaterra convinieron en una fórmula, que contenia habeis adorado. Ojala que S. Luis pudiera decir á
en sustancia que los obispos, «deseando entrar cuan V. M. palabras aun mas gloriosas: alzad la cabeza,
to les fuese posible en las vias piadosas del rey, re hijo de S. Luis; vos habeis elevado lo que estaba
mitian como depósito entre sus manos unas actas abatido, y habeis abatido lo que estaba elevado. Sin
que contenian el título de su dimision; mas que real— esto, Señor, el Dios de S. Remigio, de los apóstoles de
mente no podrian tener efecto hasta que viesen y las Galias y de sus suceseres legítimos, el Dios de
juzgasen que se aseguraban los principios en el dicho Clodoveo, de Carlo Magno y de S. Luis no estará
convenio». Escribieron al mismo tiempo á Luis XVIII presente á vuestra consagracion». Con todo eso, el
diciéndole que sus dimisiones, que solo hacian por mismo M. de Thémines concluyó por volverá ocupar
deferencia, serian ciertamente despreciadas en Roma; SUl ¿ entre los obispos que se unieron al centro
la forma en que las habian redactado debia segura de la unidad. Este prelado, que era la bandera de la
mente hacer preveer que no serian admitidas. pequeña Iglesia, (V. BLANCHARDismo), declaró en el
Los obispos no dimisionarios, puestos en especta mes de Octubre de 1829, que se adheria sínceramen
tiva para ¿ su dimision, sugirieron al rey te, y que se sometia á Pio VIII, como al gefe de la
ecsigiese á los arzobispos y obispos que gobernaban Iglesia, y que queria estar en comunion con todos los
las diócesis en virtud del concordato de 1801, hicie— que le estaban unidos. De este modo terminó un es—
sen por su parte la dimision de sus sillas; dando por travio, que solo procedia de un celo ecsagerado por
razon de esta ecsigencia, que «despues de tantos y la conservacion de las antiguas y constantes, leyes de
tan violentos sacudimientos como habian trastornado la Iglesia, infinitamente venerables sin duda, pero
los límites antiguos, despues de una necesidad tan las que se hubiera debido reconocer, con el santo Pa
estrema en que se han traspasado las reglas ordina pa Inocencio I, que puede ser algunas veces necesa
rias, están los soberanos en el deber de usar de cir— rio derogar para remediar las desgacias de los
cunspeccion y de vigilancia á fin de impedir que lo tiempos.
que se toleró en los tiempos difíciles pueda en lo su
cesivo pasar por ley, y llegar á ser un peligroso ejem Antipicomarianitas, antiguos hereges que
plo para la posteridad». pretendieron que la santa Vírgen no continuó vi
Estos prelados que aconsejaban alcanzar de los ti viendo en el estado de virginidad.
tulares actuales el sacrificio de sus sillas, eran siem
pre deudores al Papa de un acto de obediencia, y Pio . . . . . . . . V. VIRGEN.
VII estimaba en mucho una carta satisfactoria de par Se les llama tambien antidicomaritas, y algunas
te de ellos. Lo que pasó en esta ocasion presenta ana veces, antimarianitas y antimarianos. Su opinion
logía con lo que aconteció bajo lnocencio XII, relati se fundaba sobre unos pasages de la Escritura, en
vamente á los obispos nombrados que habian asisti donde Jesus hace mención de sus hermanos y de sus
do á la asamblea de 1682. En la primera carta del hermanas, y sobre otro de S. Mateo, en el que se di
22 de Agosto de 1816, M. de Perigord y otros seis de ce, que José no conoció á María hasta que dió á luz
estos prelados, se opusieron fuertemente contra el á Nuestro Salvador. Mas se sabe que entre los hebreos,
abuso que se habia hecho de las reclamaciones, y los hermanos y las hermanas significaban fuecuen
contra los relatos de hombres inquietos, sin mision y temente los primos y primas.
sin autoridad: alusion evidente al Blanchardismo ó Los antidicomarianitas eran unos secuaces de Hel
pequeña Iglesia. Esta carta no pareció bien en Roma. vidio y de Joviniano, que aparecieron en Roma á
El 15 de Octubre M. de Perigord, habiendo reunido fines del siglo IV. Fueron refutados por S. Gerónimo. ".

á sus cólegas, les declaró sus sentimientos, esponien

do los motivos que le conducian á facilitar con todo Antífona, en latin antiphona del griego ANTy
su poder un arreglo reconocido como importante y contra, y de PHONE voz, canto.
necesario; su sola suscricion anunciaba la latitud de Las antífonas fueron llamadas asi porque en su
su determinacion; no se calificaba en ella mas que al principio se cantaban á dos coros, que se respondian
antiguo arzobispo de Reims. Los demas prelados se alternativamente; y se comprendian bajo este título
adhirieron á esta acta. En fin, el 8 de Noviembre, el los himnos y salmos que se cantaban en la Iglesia.
acla de obediencia fue suscrita por los obispos no di S. Ignacio, discípulo d los apóstoles, fue, segun Só
mísionarios, autores de la primera carta del 22 de crates, el autor de este método de cantar entre los
Agosto. n griegos, y S. Ambrosio le introdujo entre los latinos.
El ejemplo de esta sumision no impidió á M. The Teodorelo atribuye su origen á Diodoro y á Flaviano.
mines el elevar nuevas reclamaciones. Hahiendo ha— Sea lo que se quiera, se comprendia bajo este títu
blado Luis XVIII de su consagracion, en un discur lo todo lo que se cantaba por dos coros en la Iglesia
so dirigido á las cámaras, este le escribió una carta alternativamente. Al presente la significacion de es
 ANT 117 ANT ,
le término se limita á ciertos pasages tomados de la doctrina indecorosa de Lutero, y las perniciosas con
Escritura, que convienen al misterio, á la vida ó dig secuencias que de la misma se seguian. En tanto que
nidad del santo, cuya fiesta se celebra, que ya sea Lutero, dice, inculcaba á los pueblos la doctrina del
en el canto ó bien en la recitacion del oficio, prece Evangelio, que nos representa los méritos de Jesu
den á los salmos y cánticos. El número de antífo cristo como el origen de la salvacion de los hombres;
nas varía segun la solemnidad mayor ó menor de los mientras que refutaba á los papistas que confunden
oficios. La entonacion de la antífona debe siempre la ley con el Evangelio, y nos presentan la felicidad
servir de regla para la de los salmos. Las primeras eterna como una recompensa de la obediencia legal,
palabras de la antífona son dirigidas por un corista se levantó un fanático llamado Agrícola, que abusó de
á cualquiera persona del clero, que la repite, y esto su doctrina y abrió la puerta á los errores mas
es lo que se llama señalar y entonar una antífona. En perniciosos. Se puso á declamar contra la ley, dicien
el oficio romano, despues de la imposicion de la antí do que no convenia proponérsela al pueblo como una
fona, el coro prosigue y la canta toda entera con el regla de costumbres, y que únicamente debian limi
salmo, y despues del salmo, todo el coro la repite. tarse á enseñar y esplicar el Evangelio; sus secuaces
¿ se dá el nombre de antífona á algunas se llamaron antinomianos. Los que los han combati
oraciones particulares que canta la Iglesia romana do pretenden que su moral era muy disoluta; que
en honor de la santa Vírgen, y que son seguidas de segun su doctrina un hombre podia entregarse á sus
un versículo y una oracion, tal como la Salve Regina, pasiones y ¿ sin remordimientos la ley di
Regina Caeli, etc. vina, con tal que estuviera adherido siempre á Jesu
cristo y que abrazase sus méritos con una fé viva.
Amtlluteramos ó Sacramentarlos, he Pero, continúa Mosheim, es preciso no creer cie
reges del siglo XVI, los cuales habiéndose separado gamente todas estas imputaciones; el principal crímen
de la comunion de la Iglesia, á imitacion de Lutero, de Agrícola consistia en algunas espresiones malso
no siguieron, sin ¿ sus opiniones, y formaron nantes, inesactas é impropias, que es preciso no to
otras sectas, tales como los calvinistas, los zuinglia mar en un sentido riguroso. Su doctrina consistia en
n0s, etc. sostener que los diez mandamientos dados á Moisés
no hablaban mas que con los judíos; que los cristia
Antimensa, es una clase de mantel consagra nos podian despreciarlos sin pecar; que bastaba el es
do, de qne se usa en ciertas ocasiones en la Iglesia plicar con claridad é inculcar lo que Jesucristo y sus
griega en los sitios en que no se halla un altar conve apóstoles habian enseñado en el nuevo Testamento, ya
niente. • relativamente á la gracia y á la salvacion, ya con
El Padre Goar observa, que en atencion al corto respecto á las obligaciones del arrepentimiento y de
número de Iglesias consagradas que tenian los grie la virtud. La mayor parte de los doctores de aquel
gos, y á la dificultad de trasportar algunos altarescon siglo tienen el defecto de no esplicar sus opiniones
sagrados, usó esta Iglesia por espacio de siglos ente de una manera clara y seguida; de aqui proviene que
ros de ciertas telas consagradas, ó de telas llamadas se les imputan ideas que jamás tuvieron. Hist. eccle
ANTIMENsIA, sabanillas de altar, para suplir esta falta. siastica siglo XVI, sect. 3.° p., c. 1.º S. 25 y 26.
Esta apologia de un seclario fanático es un tipo
Antimemianos ó Amomianos, enemigos de pertinacia y de mala fé. En primer lugar, desafia .
de la ley. Tambien se llamó del mismo modo á mu mos á Mosheim y á todos los protestantes á que ci
chas sectas de hereges. - ten un solo teólogo católico que no haya considerado
1." A los anabaptistas que sostuvieron desde lue los méritos de Jesucristo como el origen de la salva
go que la libertad evangélica los dispensaba de some cion de los hombres; que haya atribuido á las buenas
terse á las leyes civiles, y que tomaron las armas obras un mérito independiente de los de Jesucristo;
para sacudir el yugo de los ¿ y de la noble que haya representado la felicidad eterna como la
. En esto pretendieron seguir los principios que recompensa de una obediencia á la ley, y no el efecto
habia establecido Lutero en su libro titulado de la li de la gracia de Jesucristo. Los desafiamos á que citen
bertad evangélica. V. ANAna Pristas. -
uno solo que haya eonfundido la ley con el Evange
2." A los secuaces de Juan Agricola, discípulo de lio; que haya dicho que la felicidad eterna es la re
Lutero, nacido como él en Islébe, ó A islében , en la compensa de la obediencia legal, si por esto se entien.
baja Sajonia, de donde estos sectarios fueron llama de la obediencia á la ley ceremonial de los judios. A
do, Islebianos. Como dijo S., Pablo que el hombre se la verdad, Lutero achacaba todos estos errores á los
justifica por la fé, sin necesidad de las obras de la ley; teólogos católicos, disfrazando maliciosamente su doc
que cuando vino la ley se aumentó el pecado; que trina; pero despues de las decisiones tan formales del
si se puede ser justo por la ley, en vano murió Je. concilio de Trento, seguidasuniversalmente por todos
sucristo, etc. Lutero y sus discípulos lomaron de los teólogos de la Iglesia romana, hay muy mala fé
aquí ocasion para sostener que la obediencia á la en confirmar todavia la calumnia de Lutero, é impu
ley y las buenas obras de nada servian, respecto á tarles una doctrina que tienen como herética. Aun
la justificacion ni salvacion. No querian conocer que cuando fuera verdad que los teólogos católicos del si—
en todos estos pasages habla S. Pablo de la ley ce glo XVI tuvieran el mismo defecto que los de
remonial, y no de la ley moral, contenida en el De mas doctores de aquel tiempo, y que no esplicaran
cálogo, puesto que al hablar de ésta dice que los que sus opiniones de una manera bastante precisa, seria
cumpliesen la ley serán justificados. Rom., c. 2, y 13. una injusticia el tomar en todo su rigor las espre
Mosheim ha hecho todo lo posible para paliar la siones itiesactas de que se sirven para imputarles
TOMO I, 21
 ANT 118 ANT

ideas que nunca tuvieron, al ¿ que se vilupera les y distintivos de los elegidos es el no hacer nada
este proceder, respecto de los doctores protestantes. que sea desagradable á Dios y contrario á su ley.
Mosheim, al reprochar á los del ractores de Agrícola Mosheim , siglo XVII, sec. 2, 2.º part. c. 2, S. 23.
y de los antinomianos, forma evidentemente un pro Mosheim delesla con razon todas estas consecuen—
ceso á Lutero, y se condena á sí mismo. cias; pero acaso está él en estado de demostrar que
En segundo lugar, aun cuando la doctrina de es— no se deducen directa y evidentemente del dogma de
los sectarios hubiera sido tal como prelende, seria la predestinacion y del de la inamisibilidad de la jus—
tambien falsa y formalmente contraria al Evange ticia, tal como ¿ lo ha enseñado? El doctor Ar
lio. Jesucristo, Mat. c. 5, y. 17, empieza por de naldo ha probado la conexion de estas consecuencias
clarar que no ha venido á destruir la ley ni los pro en la obra titulada El trastorno de la moral de Jesu
cristo por los errores de los Calvinistas, respecto de la
fetas, sino á cumplirla; que cualquiera que destru
ya el menor mandamiento de la ley y enseñe á ha justificacion; y nosotros sostenemos que no se dedu—
cerlo, será el último en el reino de los cielos; y en se cen menos de la opinion de la gracia irresistible, opi
guida esplica muchos de estos mandamientos. A un nion comun á los luteranos y calvinistas En esta hi
jóven que le preguntaba qué era preciso hacer para pótesis, es tan absurdo el predicar la necesidad de
conseguir la vida eterna, le responde: «Si quieres en creer en Jesucristo y las ventajas de la nueva alianza,
»trar en la vida, guarda los mandamientos, que son como el exhortar á los hombres á la virtud y obe
»no cometer ni homicidio, ni adulterio, ni robo, ni diencia á la ley de Dios. Aquellos á quienes Dios no
» decir falsos testimonios, honrar á vuestro padre dá la gracia irresistible de la fé en Jesucristo no pue
» y á vuestra madre, y anar al progimo como á vos den jamás tener esta fé, asi como tampoco obedecerá
» mismo.» c. 19, y. 16. Este es el Decálogo. Es, pues, la ley cuando Dios les niega la gracia irresistible de la
una falsedad el que estos diez mandamientos no ata obediencia. En esta misma hipótesis, tambien es muy
ñen propiamente mas que á, los judios, y que los cierto que el hombre privado de la gracia no peca
cristianos puedan abandonarlos sin pecar. Es un ab ¿ á la ley; porque seria un absurdo que
surdo el oponer el Evangelio á la ley del Decálogo, el hombre que peca fuese condenable y digno de cas
porque el Evangelio la renueva; lo es tambien el de tigo, no haciendo lo que le es imposible hacer. Lue—
cir que es preciso inculcar lo que Jesucristo y los go es imposible que el hombre crea en Jesucristo y
apóstoles han enseñado sin hacer mencion del Decá obedezca á la ley sin la gracia. . . . .

logo, porque este forma una parte esencial de su Es igualmente cierto que los errores de estas di
doctrina. Pero Mosheim, como todos los protestan versas sectas de antinomianos no podian menos de ser
tes, no ve errores mas que en la Iglesia romana; hijos de la doctrina de los pretendidos reformadores.
y los mas monstruosos y repugnantes no le parecen .." Algunos pretenden que se ha dado tambien
nada en su secta. .. . el nombre de antinomianos, á los que decian que, en
3." En el siglo XVI hubo otros antinomia la práctica de las buenas obras no es necesario con
nos entre los puritanos de Inglaterra, que deduje siderar para nada los motivos naturales, porque las
ron de la doctrina de Calvino las mismas conse obras inspiradas por ellos de nada sirven para la sal
cuencias que Agrícola habia sacado de la de Lutero. vacion. Pero estos motivos no son incompatibles con
Unos trataron de la predestinacion: enseñaron que los que la fé nos propone. Cuando Jesucristo dice:
era inútil el exhortará los cristianos á la virtud y obe «Dad, y se os dará... sereis medidos como hayais
diencia á la ley de Dios, porque aquellos que ha ele medido á los demas.» Luc., c. 6, y 36: «Poneos de
gido para salvarlos, por medio de un decreto in acuerdo pronto con vuestro adversario, por temor de
mutable y eterno, son movidos á la práctica de la que no os entregue al juez, y seais encarcelados.»
piedad y de la virtud por un impulso de la gracia Mat. c. 5, y. 25. Cuando S. Pablo dice: «Gloria,
divina, al cual no, pueden resistir; al paso que los honor y paz al que hace bien, etc.» Nos lo aconseja
que tiene deslinados á una condenacion eterna no por nuestro propio interes, motivo muy natural. Una
pueden ser virtuosos, apesar de las exhortaciones y cosa es decir que es preciso no obrar por solo los mo—
amonestaciones quese les hagan, ni obedecerá la ley tivos naturales, y otra el sostener que es necesa
divina, porque Dios les rehusa su gracia y auxilios rio no obrar jamás por ninguna de estas causas. Aun
necesarios. Por último, concluyen diciendo, que es que una buena obra hecha por estos solos motivos
preciso limilarse á predicar la é en Jesucristo y las no sea meritoria para la salvacion, es, sin embargo,
ventajas de la nueva alianza. ¿Mas cuáles SOn estas laudable; el hábito de obrar así, dispone, al menos
ventajas para los que están destinados á una conde indirectamente, á practicarlo por motivos mas per—
nacion eterna? - -
fectos. Un pagano virtuoso por naturaleza está, sin du
Otros raciocinaron acerca del dogma de la inami da alguna, mejor dispuesto que uno vicioso, para ser
sibilidad de la justicia. Dijeron que los elegidos no cristiano, y practicar la virtud cuando deje de serlo.
podian decaer de la gracia, ni perder el favor divino; La Iglesia ha condenado con razon á los teólogos que
de lo que se deduce, que no son pecados reales las enseñaron que todas las buenas obras de los infieles
malas acciones que comelan, no pudiendo tampoco son pecados, y que todas las virtudes de los filósofos
ser consideradas como un abandono de la ley; que eran vicios V. INFIELEs, obRAs. -

por consiguiente no tienen necesidad de confesar sus "El suponer que los privilegios del cristianismo
pecados, ni de ¿ de ellos: que por ejemplo, pueden separarse de las ¿ obras, que la prác
el adulterio de un elegido, aunque aparezca á la vista tica de los deberes no se requiere como ¿?de
de les hombres como un gran pecado, no lo estalá nuestra fé, es debilitar las obligaciones de la mo—
los ojos de Dios, porque uno de los caractéresesencia ral y hacer una herida profunda á la sociedad. Las
 ANT 119 ANT
mácsimas antinomianas, de las cuales resulla, que es mente contra la Sagrada Escritura, el buen sentido y
inútil enseñar el Decálogo, el proponer ninguna ley, la enseñanza perpétua, no solo de la Iglesia católica,
ninguna regla de conducta, abriendo de esta manera sino lambien de todas la sociedades cristianas.
la puerta á todos los vicios y crímenes, no solo en El fundador de la secta de que hablamos reconoció
contraron partidarios en el siglo XVIII entre los sec— su error, y escribió á sus adictos una carta, en la
tarios de Whithfield. Una nueva secta, que cuenta cual les exhortaba á que volvieran á entrar en el seno
entre sus miembros hombres distinguidos por su sa de la Iglesia anglicana.
ber, riquezas y la posesion que ocupan en la socie—
dad, nació en el condado de Exeter, y se esparció por Antioquia. Parece que la Iglesia de esta ciu
el Devonshire, y por los condados de Kent, de Sussex,
dad, capital de la Siria, es la mas antigua despues de
y aun por Londres: tuvo por fundamento á un doctor la de Jerusalen; segun la tradicion es en la que San
de la universidad de Oxford, predicador elocuente y Pedro estableció su primera silla, y en donde los dis
teólogo sutil, pero sistemático. cípulos de Jesucristo tomaron el nombre de cristia
- Su sistema es la eleccion arbitraria, la predes nos. Act. c. 11, y . 19 y 26; c. 15, y. 1, &c. S. Lucas,
tinacion absoluta, el don gratuito de la salvacion uno de los evangelistas, era de Antioquia. Como era
eterna, concedido á un pequeño número de creyen la mansion del gobernador romano, que mandaba en
tes, cualquiera que haya sido su conducta en el mun la Palestina, ecsistia una relacion necesaria y contí
do. Dios decretó eternamente, por lo tanto antes de la nua entre Jerusalen y Antioquia; los que creyeron en
caida del hombre, el salvar un cierto número de los Jesucristo en esta última ciudad no podian ignorar
hijos de Adan, y envolver á los otros en una conde— los hechos que habian tenido lugar en la primera.
nacion general. ¿ lo que toca á los primeros, ejer— Con pleno conocimiento de causa fué como los judios
ee su misericordia; y por su severidad, respecto á los de Antioquia, y despues muchos paganos, abrazaron
segundos, manifiesta su justicia y aversion para con el cristianismo. Debian ecsistir entre ellos muchos
el pecado. A los primeros les basta creer firmemente testigos oculares de los milagros que Jesucristo ha
que serán salvos; están dispensados de observar los bia obrado, inmediatamente antes de la pascua en
mandamientos de Dios y practicar la virtud: la rec— que fué crucificado y de la venida del Espíritu Santo
titud moral no es relativa mas que á nuestra corta sobre los apóstoles ó la fiesta de Pentecostés. Esta
mansion aquíá bajo. Viviendo segun los preceptos de Iglesia tuvo, á no dudarlo, una liturgia propia desde
la templanza y de la caridad, llenando los deberes su origen; pero seguramente no fue la que despues
que nos impone la sociedad, puede uno ecsimirse de apareció bajo el nombre de S. Pedro. V. Lruncia.
los dolores, acrecentar su fortuna, y conciliarse la Que San Pedro habia fundado la silla episcopal de
estimacion y la amistad. Si por el contrario, un hom Antioquía antes de irá Roma, es un hecho compro
bre es intemperante, las enfermedades precoces vin - bado por los autores mas respetables: Orígenes, Eu
dican á la naturaleza; si atenta á la vida, al honor y sebio, S. Gerónimo, S. Juan Crisóstomo, &c., hablan
á las propiedades de su prójimo; sufre las penas seña de ello como de una cosa que nadie ha puesto en du
ladas por las leyes contra estos desórdenes. Mas las da, y la fiesta de la cátedra de S. Pedro en Antioquia
virtudes y los vicios no obtienen mas que recompen es muy antigua en la Iglesia. Vidas de los Santos Pa—
sas ó castigos terrenales: la felicidad eterna no pre dres y de los Mártires, 22 de febrero.
de ser el resultado de nuestra conducta en este mun Basnage, Hist. de la Iglesia, l. 3, c. 1, ha hecho
do. Los secuaces de esta doctrina tratan de fundarla todos los esfuerzos posibles para probar lo contrario
sobre una interpretacion arbitraria de los once pri por las Actas de los apóstoles; pero no ha podido sa -
meros capítulos de la Epístola de San Pablo á los car de ellas mas que pruebas negativas y dificulta
TomanOS. des de cronolojía, débiles armas para echar abajo
- El fundador reunió en juntas secretas algunos unos testimonios tan positivos, con respecto á un he
miembros del clero anglicano, sobre los cuales habia cho, que debió ser muy público.
adquirido cierta influencia por su predicacion y es— En el V y Vl siglo el patriarcado de esta ciudad
critos. Se apresuraron á adoptar sus ideas, abando se llamaba la diócesis de Oriente: se estendia á la Si —
naron sus ricas prebendas, y predicaron gratuitamen ria, la Mesopotamia y la Cilicia, fué saqueada la ciu
te la doctrina de su maestro. Los mas opulentos cons dad por Chosroes, rey de Persia, en el año 50, y to—
truyeron templos á donde concurria un pueblo igno mada por los sarracenos mohometanos en 637. Los
rante, que se lisonjeaba de tener por oradores á per cruzados la volvieron á tomar en 1098, y cayó en
sonajes independientes por su fortuna, que gozaban poder de los turcos otra vez en 1268. En el dia, tres
de un gran crédito, y no ecsigian de sus adictos, ni obispos taman el título de Patriarcas de Antioquia:
la obediencia al Decálogo, ni la práctica de ninguna uno es el de los melouilas ó cristianos griegos cismá
virtud, sino únicamente la inalterable persuasion de ticos; otro el de los sirios monofisitas o jacobitas; y
que estaban predestinados para salvarse. el tercero el de los sirios maronilas ó cristianos ca—
La necesidad de las buenas obras y de la fé son tólicos adheridos á la Iglesia romana. Se dice que el
dos puntos de doctrina paralelos é inseparables: por de los jacobitas se ha unido hace poco á esta misma
todas partes resalta esta verdad en el antiguo, y so— comunion con muchos obispos de su dependencia.
bre todo en el nuevo Testamento. San Pablo mortifi—
caba su cuerpo, por tenor de que aun habiendo pre Antipapas. Se da este nombre á los que pre
dicado á los demas, se encontrara en el número de los tenden darse á conocer como soberanos pontífices,
réprobos. Es preciso padecer una ceguedad moral, en perjuicio de un papa legítimamente elegido; se
para no ver que el antinomianismo choca directa cuentan desde el siglo Ill hasta el dia veinte y ocho.
 ANT 120 ANT
Antípodas, hombres cuyos pies corresponden puede decir en francés; pero nunca en latin, y en es
á los nuestros; esto es lo que significa esta palabra. la lengua la frase tenia un sentido muy diferente.
Si creyéramos á Aventino en sus Anales de Baviera, Conviene en que los antiguos filósofos negaron la
Bonifacio, arzobispo de Maguncia y legado del Papa ecsistencia de los antipodas lo mismo que los Padres
Zacarías en el siglo VIII, declaró hereje á un obis de la Iglesia; estos últimos no estaban obligados áser
po de aquella época, llamado Vigilio ó Virgilio, por mas hábiles en cosmografía que los filósofos de su si
haberse atrevido á sostener que habia antipodas. glo. No obstante Filopono, que vivia á fines del VI si
El autor de una disertacion impresa en las Memo glo, ha demostrado en su libro de mundi creat l. 5,
rias de Trevour, enero 1708, sostiene: 1.º que nc es c. 13, que san Basilio, san Gregorio de Nisa, san Gre
tá comprobado este hecho; el único monumento que orio Naciano, san Alanasio y la mayor parte de
de él ecsiste es una carta del Papa Zacarías á Bonifa os Padres de la Iglesia sabian que la tierra es redon
cio: «Si se prueba , le dice el soberano Pontífice, que da. Tambien se habla de los antipodas en san Hilario,
Vigilio sostiene que hay otro ¿? otros hombres In. Ps. 2, n. 23; en Orígenes, l. 2. de Princip, c. 3;
debajo de esta tierra, otro sol y otra una, reunid un en san Clemenle Papa, Epist. 1." ad Cor., n, 20 Véan
concilio, condenadle y arrojadle de la Iglesia, des se las notas. No es pues cierto que en general, los
pues de haberle despojado del sacerdocio, &c.» No escritores eclesásticos hayan estado equivocados so
se puede demostrar, dice este autor, que fuese eje bre los antipodas hasta el siglo XV, como han su
cutada esta órden del Papa: sea que la acusacion in puesto algunos autores (1).
tentada contra Vigilio no fuese verdadera, ó bien
porque esplicara sus palabras ó se retractara, lo cier Antitaeton, antiguos herejes gnósticos, llama
io es que despues de aquella época, vivió en buena dos asi, porque al confesar que Dios, creador del uni
armonía con el Papa, fué ascendido á el obispado verso, era bueno y justo, sostenian que una de sus
de Salzbourgo y canonizado tambien despues de su criaturas habia sembrado la cizaña, es decir, creado
muerte, honor que no se le habria hecho si hubiera el mal moral, y nos habia obligado á seguirle para
sido condenado como hereje. ponernos en oposicion con Dios; de aqui trae ori
Dice, 2.º que el Papa Zacarías no habia obrado gen su nombre de ANTITAsso yo me opongo, yo
mal; que si Wii, sostenia que habia otro mundo y combato., Añadian que los mandamientos de la ley
otros hombres, es decir, hombres de una especie di estaban basados sobre malos principios, y lejos de
ferente de la nuestra y que no eran como nosotros considerar como un crímen el quebrantarlos creian
hijos de Adán; otro sol y otra una diferentes de los vindicar á Dios y hacerse agradables á sus ojos vio
que nos alumbran este obispo hubiera sido verdade lándolos. Han sido precursores de los maniqueos.
ramente digno de condenacion, porque esta parado Véase á san Clemente de Alej. Strom, l. 3; Dupin
ja seria contraria á la Sagrada Escritura. En este Bibl. des auteurs eccl. des trois premiers siecles; Tille
sentido es en el que lo entendia el Papa Zacarías y mont. t. 2, p. 357.
en este mismo san Agustin rechazó los antípodas en
el libro diez y seis de la Ciudad de Dios, c. 9. Antitrinitarios. Este nombre conviene á to
No ha gustado mucho esta apología á un crítico dos los herejes que han atacado el misterio de la
moderno. Segun él, vale mas atenerse á la tradicion Santísima Trinidad, y que no han querido reconocer
que nos dice que fue condenado Vigilio. Es verdad, tres personas en Dios. Los samosalenses, que no ad
ue el autor de esta tradicion es Aventino, tabernero mitian ninguna distincion entre las Personas divinas,
¿ Baviera, que escribió en el furor del luteranismo;los arrianos que negaban la divinidad del Verbo,
mas los protestantes reunieron con el mayor cuidado los macedonianos, que ponian en duda la del Espíritu
todas sns invectivas contra los eclesiásticos; las dan Santo, todos han ¿ antitrinitarios. Con este nom
fé y por consiguiente es indispensable pensar como bre se entienden principalmente en el dia los socinia
ellos. Segun este crítico, vale mas que la condena nos, que tambien se denominan unitarios. V. Soci
cion recaiga sobre el Papa Zacarías, porque no es NANOS,
preciso que la Iglesia sea infalible en materia de fí
sica; pero todavia es menos necesario condenará un Antitypo, voz griega formada de la preposicion
Papa sin justicia, por complacer á algunos protestan ANTv por, en lugar, y de Tupos, figura, en su
tes. Es verdad, dice el sábio Leibnitz, que Bonia significacion gramatical. Quiere decir lo que se pone
cio, arzobispo de Maguncia, acusó á Vigilio de Salz en lugar de un tipo, de una figura; pero en los auto
bourgo de error acerca de este punto, y que el ¿? res griegos significa simplemente tipo, figura, se
contestó á su carta de una manera que se acercaba mejanza.
mucho á la opinion de Bonifacio; pero no encontra En el nuevo Teslamento hay dos pasajes en que
mos en ninguna parte que tuviera consecuencias esta se usa esta palabra, y cuyo sentido ha dado lugará
acusacion. Los dos antagonistas se reputan como disputas. 1.” En la Epistola á los hebreos, c. 9, y.2%
santos; y los sábios de Baviera, que consideran á Vi se dice: «Jesucristo no ha entrado en un santuario
gilio como un apóstol de la Carintia y de los paises hecho por mano de los hombres y figura, ANTITUPA
circunvecinos, justificaron su memoria. Espiritu de del verdadero santuario, sino en el cielo mismo,
Leibnitz, t. 2, p. 56. á fin de presentarse á Dios por nosotros.» 2.” En la
El crítico de que hablamos cree que Vigilio po primera Epistola de san Pedro, c. 9, y, 21, es compar
dia decir inocentemente que ecsistia bajo la tierra rado el bautismo á el arca de Noé, que preservó del
otro sol y otra luna, como nosotros decimos que el
ol de Etiopia no es el nuestro. Seguramente asi se (1) º Sº vease la adicion hechº al articulo ALEMANIA
 ANT 121 ANT
diluvio universal á este patriarca y su familia, se Antolego, del griego ANTologioN, que traducº"
llama ANTYTUPoN, lo que la Vulgata traduce por si mos en latin por florilegium, manojo de flores.
milis ¿ semeiante. No vemos la necesidad de Es una coleccion de los principales oficios que es
abandonar el sentido ordinario del término para re tán en uso en la Iglesia griega. Contiene los oficios
currir á la significacion gramatical en ninguno de es propios de las fiestas de Jesucristo, de la santísima
los pasages. Virgen y de algunos santos; ademas los oficios para
La palabra antitypo se encuentra tambien en los los profetas, los apóstoles, los mártires, los confeso
escritos de los Padres griegos y en la liturgia de su res, las vírgenes, etc. Leon Allatius, en su primera
Iglesia para designar la Eucaristía misma despues Disertacion sobre los libros eclesiásticos de los griegos,
e la consagracion: de aqui han deducido los protes habla de ella con muy poco elogio. Al principio no
tantes que, segun la creencia de la Iglesia griega, es era mas que un librito que la codicia ó el capricho
te sacramento no es mas que la figura del cuerpo de de los que le reimprimieron le aumentaron mucho;
Jesucristo. pero fuera de algunas pequeñas innovaciones, no con
Esta consecuencia es falsa: aunque las especies tiene mas que lo que se encuentra en las prácticas y
eucarísticas contienen el cuerpo de Jesucristo, no por en los demas libros eclesiásticos de los griegos.
eso dejan la figura, el typo, el símbolo, lo que se pre Ademas de este antologo que está en uso en las
senta á la vista; porque este cuerpo no aparece con Iglesias griegas, Antonio Arcudio, publicó otro nue
¿ cualidades sensibles, sino bajo las apariencias vo con el título de nuevo antologo ó florilegio, impre
6203), so en Roma en 1598: es un compendio del primero,
E verdad que Marcos de Efeso, el patriarca Jere una especie de breviario en cortas dimensiones y có
mias y otros griegos, dicen que en la liturgia de San modo para cuando viajan los sacerdotes y monges
Basilio el pan y el vino se llaman antitypos antes de griegos, que no pueden llevar el primero en razon á
la consagracion. Esto no impide que se puedan deno su gran volúmen; este, dice Allatius, que es mas in
minar del mismo modo despues, porque por medio completo que el otro, y acusa al compilador de mu
de la consagracion no sobreviene ninguna alteracion chas alteraciones é inesactitudes considerables. Allat.
en las cualidades sensibles ó en las apariencias del de libr. ecles. graec; R. Simon, Suplem. á las ceremo
pan y del vino; la figura siempre queda la misma, nias de los judios,
aunque la sustancia esté cambiada.
Qué importa el abuso que pueda hacerse de una Antonalmo (S.), arzobispo de Florencia, murió
palabra cuando por otra parte está probada la creen el año de 159; asistió en calidad de teólogo al con
cia? En el concilio de Florencia, los griegos decla cilio general que se celebró en 1439, cuando no era
raron solemnemente que creian áJesucristo realmen mas que religioso de santo Domingo. Tenemos de él
te presente en la Eucaristía despues de la consagra una Suma teológica en la cual trata de las virtudes y de
cion; toda su disputa con los latinos consistia en sa los vicios, muchos sermones y otros libros de moral.
ber si despues de la consagracion debian todavia lla o. S" Entre las varias obras de S. Antonino es la
marse los símbolos antitypos: disputa que nos pare mas esmerada y apreciable la que se titula: Summa
ce bastante frívola. Despues de la consagracion nos Theologia moralis, partibus quator districta. Se han
otros decimos tambien símbolos eucaristicos; por qué hecho de ella varias ediciones en Venecia, Strasbur
razon los griegos no podian decir antitypos en el mis go, Basilea, etc. La de Venecia es conocida bajo el
mo sentido? título de: Juris pontificii et cesarei summa, etc. El
No es, pues, necesario cambiar la significacion usual Padre Mamachi hizo una edicion de esla obra en la
de este término suponer que antitypo significa lo que misma ciudad, año 1751 en tomos en l.”, enrique
está puesto en lugar de la figura; el cuerpo de Jesu ciéndola con muy estimables notas. Los célebres apo
cristo no está puesto en lugar de la figura, sino en el logistas de los escritores y hombres ilustres de la Or
de la sustancia del pan; y esta sustancia jamás puede den de Santo Domingo, el P. Echard y el P. Fouron,
denominarse figura en ningun sentido. hablan respectivamente del santo arzobispo de Flo
En el sétimo concilio general, S. Juan Damasce rencia y de sus obras. Pio II tambien honró la memo
no y los diáconos Juan y Epifanio, queriendo espli ria de S. Antonino escribiendo la historia de sus edi
car el pensamiento de los liturgistas griegos sobre ficantes virtudes.
este objeto, dicen que al denominar á la Eucaristía
antitypo, estos autores se referian al tiempo que habia ¿ Amatomimos. Asi se llaman los canónigos re
precedido á la consagracion y no al que le seguia. gulares de la Orden de S. Antonio. Esta Orden tuvo su
Simon, Hist, crit. de la croyance des nations du Le origen en el siglo XIl. Un señor aleman, que se lla
pant. Esta aplicacion no nos parece muy necesaria; maba Joselin, descendiente de los condes de Poitiers,
lo que era figura antes de la consagracion lo es de la ilustre casa de Turena, emprendió por devocion
tambien despues, porque, por medio de la consa un viaje á la tierra santa. A la vuelta le pareció del
gracion en nada cambia la figura ó lo que aparece caso detenerse en Constantinopla, en donde le rega
á la vista. laron algunas reliquias de S. Antonio, que trajo á es
Tenemos en el dia monumentos tan auténticos de te pais. Miraba él estas reliquias como un confortati
la creencia de las diferentes sectas que contiene la vo en sus espediciones militares, y las traia consigo
Iglesia griega de los melquitas, jacobitas, sirios, nes contínuamente, segun la costumbre de aquel tiempo.
torianos, cotos, eutiquianos, etc. que los protestantes El Papa y los obispos le pidieron que las espusiese á
no se atreverán á disputar sobre este punto. V. La la veneracion pública en un sitio decente. El obede
PERPETUIDAD DE LA FÉ. ció; y escogiendo para ello el pequeño pueblo de la
 ANT 122) , ANT

Mote-Saint-Didier, de que era señor, puso los ci te al culto divino y á las funciones eclesiásticas, que
mientos de la magnífica Iglesia de S. Antonio, que son perpétuas por su naturaleza. El Papa atendió á
subsiste aun hoy dia. esta súplica concediendo á los hospitalários la cali
En aquel mismo tiempo estaba alijida la Europa dad de canónigos regulares de S. Agustin, cuya re
por causa de un azote terrible, contra el que eran va gla seguian ya, y les nombró un abad general. La
nos los esfuerzos de la medicina. Esta enfermedad era capital de la congregacion de la Orden es la abadía de
un fuego que devoraba, á cuantos eran atacados de S. Antonio de Viena. El abad general, que es siem
ella: Santo Tomás lo llamaba fuego infernal; pero pre un regular, tiene asiento en la asamblea de los
era mas generalmente conocido con el nombre de si estados del Delfinado, inmediato al obispo de Greno—
deracion ó fuego sagrado, como si se dijera, producido ble, que es el presidente de ella. Tiene asiento igual
por la influencia de los astros ó del cielo. Creyeron mente en el parlamento del Delfinado, segun las car—
que la intercesion de S. Antonio era el único reme las patentes que dieron Cárlos VI y Luis XI con este
io que podia contener sus progresos, y por eso lo motivo.
llamaron fuego de S. Antonio, y venian en tropas á la Los genovevinos, conocidos por el título de canó—,
Mote-Saint-Didier á reclamar la proteccion del San— nigos regulares de la congregacion de Francia, han
to. Era tan grande el número de enfermos que acu disputado en 1723 con los Antoninos la calidad de
dian, que precisamente tenian que quedarse muchos canónigos regulares, pero estos la han conservado por
á la intemperie por falta de alojamiento. un decreto del gran consejo de 2 de marzo de 1723.
Gaston y su hijo Gerin, dos caballeros ricos de Aunque todos los canónigos que viven bajo la re
una de las primeras casas del Delfinado, compadeci— gla de S. Agustin estan habilitados para obtener los
dos de la situacion de aquellos infelices, tomaron la beneficios pertenecientes á las congregaciones en que
resolucion de subvenir á sus necesidades, y destina. se observa esta regla, sin embargo, los beneficios de
ron sus bienes y sus personas para conseguirlo. Otros la orden de los Antoninos estan de lal suerte anejos á
siete caballeros de la misma provincia, animados de los miembros que la componen, que no pueden im
un tan bello ejemplo, quisieron tener parte en aquella etrarlos los canónigos de las otras congregaciones de
buena obra haciendo construir un hospital en el pue S. Agustin. Así se ha dispuesto por un decreto del
blecito de la Mote, en donde recibieron á todos los gran consejo del 10 de febrero de 1753, citado por
enfermos de ambos secsos atacados del fuego de San Denisart, contra un canónigo regular del Orden de la
Antonio. A estos ilustres hospitalarios debió su insti Cancelada, que es bastante semejante á la congrega
tucion la Orden de los Antoninos; la cual se estable— eion de Francia. Los religiosos de S. Antonio, cuan
ció en el pontificado de Urbano II, formando otras en do estan sirviendo los beneficios pertenecientes á su
Francia, en Alemania, en Italia, en España, en Orden, no son inamovibles en la posesion de ellos; pue
Inglaterra, en Escocia, en la Ungría, en la Lorena, den ser llamados al claustro sin forma de proceso por
la Saboya, el Piamonte, y en la otra parte de los ma el capítulo, ó por el superior general, juntamente
res. Le dieron á Gaston, como primer fundador, el con el definitorio, con tal que el obispo diocesano
título de gran maestre y gobernador de todos aque preste su consentimiento. Hay con este motivo un
llos nuevos establecimientos, que reconocieron por edicto del mes de marzo de 1734, registrado en el
su capital al pueblecito de la Mote. Todas las casas gran consejo el 26, y citado por los autores del Dic—
de la Orden se hicieron otras tantas encomiendas di cionario Eclesiástico. Esta práctica es bastante con
vididas en generales y subalternas. Las generales de— forme á la de otras Ordenes religiosas con respecto á
pendian inmediatamente de la capital, siendo el gran los que poseen los beneficios.
maestre titular de ella, y las subalternas dependian Se formó en 1775 el proyecto de reunir la Orden
de las generales. hospitalaria de S. Antonio de Viena á la de Malta.
Los hospitalarios se arreglaron á una vida comun Prévio un tratado que se hizo entre las dos Ordenes,
y uniforme, y por señal esterior de su profesion lle— y con el permiso real, pidieron á Roma la aprobacion
vaban en sus vestidos, una tau griega: por eso la r de esta reunion los comisarios de ambas. El papa Pio
de nuestro alfabeto la llaman impropiamente la cruz VI suprimió la orden de los Antoninos en una bula
de S. Antonio. La T, que representa la muleta en que de 17 de diciembre de 1776, y el 30 de mayo del año
se a ¿? los enfermos, era la figura de la hospi siguiente el rey espidió unas cartas patentes autori
talidad que ejercian los Antoninos; y por eso llevan zando la fulminacion y publicacion de esta bula,
esta señal los canónigos regulares de S. Antonio, sus al mismo tiempo concedió á la Orden de Malta el go
SUICeSOreS. ce provisional de todos los bienes pertenecientes á la
La forma de su antiguo régimen subsistió por mas de Antonio, esceptuando solo los curatos, cuyo nom
de dos siglos: diez y siete grandes maestres se suce bramiento se lo reservaba á los obispos. Las mismas
dieron los unos á los otros en este intérvalo de tiem cartas patentes conceden á la cámara alta de Paris
po. Pero en 1297 Aimon de Montiñi, décimoséptimo el conocimiento de cualesquiera disputas que ocur
gran maestre, atendiendo á que la enfermedad del riesen sobre la ejecuciou del tratado y la bula de su-,
fuego de S. Antonio no era ya tan frecuente, que el presion. Fueron estas registradas en el Parlamento
objeto que habia dado ocasion al establecimiento de el 20 de junio de 1777, encargando que se les dejase
los hospitalarios acaso cesaría enteramente, y que es á los curatos servidos por los canónigos de S. An
lo ocasionaria la estincion de su Orden, pidió al Papa tonio una cóngrua en granos proporcionada á la es—
Bonifacio VIII una nueva forma de constitucion que, tension de la parroquia, al número de habitantes y á
sin, perder de vista el objeto primordial del instituto las rentas que la Orden gozaba en ella; y se les deja
de los hospitalarios, los destinase mas particularmen ba á los curas, igualmente sin diminucion de la con
 ANT 123 ANT
grua, la casa presbiteral y sus dependencias, los fon , un talento penetrante, muy buenos ojos; de un hom
dos de aniversarios y fundaciones, las ofrendas y bre poderoso, el brazo largo, etc. Este lenguage no
obligaciones, y generalmente todos los derechos ca engaña á nadie. Asi por analogía los ojos de Dios son
suales, especialmente anejos á los curatos. (Estracto el conocimiento que tiene de todas las cosas; su ma
del Diccionario de Jurisprudencia). - no y brazo, su poder, su hoca y palabra las señales
que da de su voluntad, &c. El Salmista dice que los
Antropófagos, pueblos que comen carne hu cielos son la obra de los dedos de Dios, á fin de dar—
mana; su nombre viene de ANTRopos, hombre, y de nos á entender que Dios los ha hecho, sin emplear
FANEIN, comer. Antes de que los hombres, sumidos para ello lodas sus fuerzas, sino con la misma facili
en el eslado salvage, se suavizaran cultivando las ar— dad que lo que nosotros egecutamos con la punta de
mas, y se civilizaran por medio de las leyes, parece los dedos. Véanse los dos artículos siguientes.
que la mayor parte de los pueblos comian carne hu
mana: todavia acontece lo mismo entre los salvages: Antropomorfismo, Antropomorutas,
los griegos y los romanos atribuian á Orfeo la refor voz formada de ANTRoPo hombre y de MoRFe forma.
ma de este uso horrible. Podrá creerse que le ha dado El antropomorfismo es el error de los que atribuyen
la idea á un filósofo de nuestro siglo de acusar á losá Dios una figura humana, un cuerpo humano. Los
judios de haber sido antropófagos ? Leemos en Eze— antiguos hereges tomaron al pie de la letra las an
quiel c. 31 y sig. «Decid á los pájaros del cielo y á tropologias de la Escritura, y lo que nos dice sobre
las bestias del campo: venid, acorred, á la víctima que Dios ha heºho al hombre á su imágen y seme—
que voy á inmolar sobre las montañas de Israel, pa janza. De aqui dedujeron que Dios tiene realmente
ra que comais su carne y hebais la sangre. Comereis pies, manos, ojos y un cuerpo como nosotros; que
la carne de los guerreros, bebereis la sangre de los los patriarcas habian visto á Dios, no bajo una figu
grandes de la tierra, delos carneros y de los toros, &c.» ra preslada, sino en su propia sustancia divina. De
Segun el filósofo de quien hablamos, los pájaros del nominaban origenistas á los que sostenian que Dios es
cielo y las bestias l campo son los julios. un ser puramente espiritual: alegorizan, decian ellos
No refutariamos este absurdo, si no supiéramos has como Orígenes, las palabras de la Escritura, que prue
la qué punto los discípulos de los filósofos llevan la ban que Dios tiene un cuerpo como nosotros.
incredulidad. -

S. Epifanio llama á los antropomorfitas audianos,

de un cierto Audius, que se cree fuera su gefe, y que
Antropología, palabra derivada del griego vivió en la Mesopotamia ; fue casi contemporáneo de
de ANTRopos, hombre y Logos, palabra; es una mane Arrio ; S. Agustin los llama vadianos, vadiani.
ra de espresarse los escritores sagrados, por la cual Mosheim, que cree, aunque por pruebas de muv
poco fundamento, que el antropomorfismo era un er
atribuyen á Dios, miembros, acciones ó afecciones que
no convienen mas que al hombre, con el objeto de ror muy comun en los primeros siglos de la Iglesia,
acomodarse á la débilidad de nuestra inteligencia.no solo entre los fieles sino aun entre los obispos,
Asi se dice en el Génesis, «que Dios marchaba por confiesa sin embargo, que los que le sostenian no atri
el paraiso terrenal, que llamó á Adan, que se arrepin buian á Dios un cuerpo grosero y carnal, sino un
tió de haber hecho el hombre»; en los salmos, «que cuerpo sulíl y aéreo, semejante á la luz, organizado
los cielos son la obra de las manos de Dios, que sus como el cuerpo humano, no por necesidad , sino por
ojos están abiertos y velan sobre el indigente, etc. adorno y para hacerse visible á los bienaventurados.
Con muy poco fundamento se han escandalizado Tertuliano parece que cayó en el antropomorfismo,
en otro tiempo de estas espresiones los maniqueos, y pero se le puede disculpar con facilidad, porque ha
han acusado de error á los escritores del antiguo Tes demostrado contra Hermógenes, que Dios es creador
tamento; y todavia con menos, otros hereges las han de la materia; hubiera pues sido necesario que Dios
tomado al pie de la letra, deduciendo que Dios tiene creara su propio cuerpo, absurdo que jamás se le pa
forma humana. La Escritura nos enseña con bastan só por la cabeza á Tertuliano. Este Padre cree que
te claridad, que Dios es un ser puramente espiritual cuando Dios se ha aparecido á los patriarcas, no era
simple, sin composicion y sin partes. Mas para ha Dios el Padre sino su Hijo, que al tomar una figura
cer comprenderá los hombres las operaciones de humana preludiaba, por decirlo asi, la Encarnacion.
Dios ha sido indispensable servirse del lenguage hu Adv. Marcion. lib. 4, c. 27. Por lo tanto estaba bien
mano; y este lenguage no nos puede suministrar pa persuadido de que Dios no tenia cuerpo.
ra espresar las acciones de Dios otros términos que Mosheim retiere que fue renovado este error en el
los que designan las acciones de los hombres. Estos siglo 10 en ltalia por gentes muy vulgares, y aun por
términos, respecto de Dios, son metáforas que nos eclesiásticos, y que les indujo a ello el hábito de ver
enseñan únicamente que Dios obra, produciendo por imágenes en las Iglesias. Aun cuando esto fuera cierto
un simple acto de su voluntad, los mismos efectos que no se deduciria nada contra el culto de las imáge
si tuviera pies, manos, ojos, &c. nes; los antropomorfitas del siglo IV, cayeron en el
Caemos en el mismo inconveniente con respecto á error por interpretar groseramente muchos pasages
las operaciones de nuestra alma. Como los órganos de la sagrada Escritura. Sin embargo los protestan
del cuerpo son los instrumentos de que nos servimos tes pretenden que los hombres mas ignorantes leen
la Escritura santa.
para egercer nuestras facultades espírituales, es muy
natural que espresemos estas últimas por medio de En el dia y entre los incrédulos modernos, unos
las funciones corporales. Decimos, por ejemplo, de acusan de antropomorfismo á todos aquellos que ad
un hombre de genio que tiene muy buena cabeza; de miten un Dios; porque no podemos pensar en Dios sin
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formarnos una imagen suya. Pero esta ilusion no Anumelaelona, es la nueva que el ángel Ga
prueba nada, en el momento que hagamos profesion briel dió á la santísima Vírgen, que concebiria el Hi
de creer que Dios es un puro espíritu; todas las veces jo de Dios por obra del Espíritu Santo. Véase ENCAR
que oimos nombrar un objeto que no hemos visto NAcioN. Los griegos la llaman EvANGELlomos buena
nunca, nos formamos de él una imágen, y esta ima nueva, kAsRETvoMos salutacion.
gen siempre es muy diferente de lo que es en sí mis
mo el objeto: luego nada se deduce de esto. Anumelaelon, así se llama tambien una fiesta
Otros vituperan á los teólogos el antropomorfismo que se celebra en la Iglesia, romana, por lo general el
espiritual, es decir, el atribuir á Dios todas las cua 25 de marzo, en memoria de la Encarnacion del Ver
lidades humanas, el entendimiento, la voluntad, la bo divino. El pueblo llama á esta fiesta la Vírgen de
ciencia, la sabiduria, etc. De este lenguage dicen se marzo, á causa del mes en que cae.
sigue que Dios es de la misma naturaleza que nos La institucion de esta fiesta en la Iglesia latina es
otros, un hombre como nosotros, aunque tal vez mas antiquísima; entre los sermones de S. Agustin, que
perfecto. Aun cuando esto fuera cierto, ¿seria nece murió en 30, tenemos dos sobre la anunciacion, que
sario abrazar el ateismo, porque no podamos tener de son el décimo séptimo y el décimo octavo de sanciis.
Dios ideas dignas de su grandeza y de sus perfeccio El sacramentario del Papa, Gelasio I, demuestra que
nes infinitas? ó es preciso abstenernos de pensar y esta fiesta estaba establecida en Roma antes del año
hablar de Dios, porque el lenguage humano no es 69; pero la Iglesia griega posee monumentos de una
bastante perfecto? mas la acusacion de los ateos no época todavia mas remota. Próculo, que murio en 446
tiene fundamento. Creemos y declaramos que en Dios y S. Juan Crisóstomo en 407, tienen entre sus obras
toda perfeccion es infinita, exenta de todos los defec discursos sobre el mismo misterio. Rivet, Petkins v
tos del hombre, pero que nuestro entendimiento li algunos otros escritores, prolestantes han puesto en
mitado no puede concebir el infinito; por lo tanto en duda la autenticidad de las dos homilias de este último
esto no hay peligro de errar. Véase Aranuros y el Padre sobre este asunto; pero Vosius las admite
artículo siguiente. prueba que son verdaderamente de este santo doctor.
Por lo tanto se engaña Bingham al decir que tuvo
Antropopatia, figura, espresion, discurso origen esta fiesta en el séptimo siglo. Orig. ecles.,
por cuyo medio se atribuyen á Dios las pasiones hu tom. 9, l. 20, c. 8, $.. -

manas, como el amor, la cólera, elódio, los celos, &c. Es muy probable que al principio, se celebrara en
Nn es lo mismo que antropologia; esta tiene lugar memoria de la Encarnacion del Verbo, y que el uso
cuando se atribuye á Dios alguna cosa corporal que de unirá ella el nombre de la santísima Vírgen es
convenga al hombre, como miembros, &c., Antropo mas reciente. Lo mismo sucede con la costumbre de
patia no se dice sino en el caso de asignarle pasiones solemnizarla el 25 de marzo. Los griegos la celebran
ó afecciones humanas. en el mismo dia que nosotros; pero muchas Iglesias
Pues que Dios es inmutable y soberanamente per de Oriente, la han colocado en el mes de diciembre,
fecto, es evidente que no se le pueden atribuir pa antes de Natividad. Los sirios la denominan Busca
siones, asi como lam miembros corporales sino Rane, informacion, y en su calendario la han fijado
en un sentido metafórico. Se dice que Dios está irri en el dia 1.° de diciembre. Los Armenios la celebran
tado cuando castiga y aborrece á los impios; por la el 5 de enero, á fin de que no caiga en cuaresma.
misma razon que es celoso por su culto; porque pro Segun la antigua disciplina, las fiestas y el ayuno se
hibe que se rinda á otro este. Véase Glasii Philog. sa consideraban como incompatibles.
cra, col. 1530 y sig. En Occidente hay la misma variedad. Se cree qne
Tertuliano decia á los marcionitas que se escanda la Iglesia de Puy en Velay ha conservado la costum
lizaban de estas espresiones de la Sagrada Escritura: bre de celebrarla durante la semana santa cuando cae
«Os repito que Dios no ha podido conversar con los en ella, aunque sea viernes santo: la de Milan el do—
»hombres, á menos que no se dignara hablar como mingo antes de Navidad, y las iglesias de España la
»ellos, y atribuirse sus sentimientos y afecciones. Era hacen en el 25 de marzo; pero estas últimas la cele
» preciso este lenguage humano, para poner al alcan bran tambien en cuaresma. En 636, el décimo conci
lio de Toledo mandó que la fiesta de la Anunciacion
»ce de nuestra debilidad las grandezas de la majes
»lad suprema. Si esto parece indigno de Dios, es nede Nuestra Señora y la de la Encarnacion del Verbo
»cesario al hombre; ahora bien, nada es mas digno divino, se hiciera ocho dios antes de Navidad, porque
» de Dios que la instruccion y la salvacion de sus cria el 25 de marzo, dia en que tuvo lugar este místerio,
»turas:» Adv. Marcion. l. 2, c. 27. Origenes contra cae generalmente en cuaresma y á veces en semana
Celso lib. 4, n. 71 y sig. S. Cirilo contra Juliano l. 5, santa ó durante la solemnidad de la Pascua, en cuya
p. 151.15% responden del mismo modo. tiempo la Iglesia se ocupa de otros misterios y cere
monias. S. Ildefonso confirmó este decreto, y llamó á
Anuales (ofrendas). Son las que hacian an esta fiesta la espectacion delparto de la Santisima Vir
tiguamente los parientes de personas difuntas el dia gen.Tambien se denominó la fiesta de las Oes ó de la
aniversario de su muerte. Se llamaba á este dia cabo O; porque durante esta octava se canta todos los dias
de año, y se celebraba la misa con gran solemnidad. para el Magníficat una antífona solemne que empie
Se dice tambien en Paris anual una fundacion de za por o, como O Rea gentium, 0 Emmanuel, &c. Es
misas para todos los dias del año, por la intencion de una esclamacion de alegria y de deseo.
un difunto: fundar un anual. V. el antiguo Sacra En la Iglesia de Roma y en la de Francia, no se ha
mentario por Grandeolas. 1.° parte, pág. 529. ce esta última fiesta sino en algunos monasterios de
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anunciadas ú otras religiosas, pero desde el 15 de di Este hombre mató á Eglon, fingiendoquererle hablar,
ciembre hasta el 23 se canta todos los dias á vísperas se puso á la cabeza de los israelitas, ganó una bata
al son de las campanas una de estas antífonas, que el lla y los sacó del poder de los Moabitas. Los censores
pueblo llama las Oes de Navidad, y los rubricarios an de la Sagrada Escritura dicen que Aod fue culpable
tífonas mayores, antíphona majores; espresan los di de un regicidio, , que es muy mal ejemplo para un
ferentes títulos, bajo los cuales los profetas anunciaron pueblo que está descontento con su soberano, siendo
al Mesias. causa de muchos crímenes de la misma especie.
Los judios llaman tambien anunciacion á una Nos sorprenderia menos esta decision, si no cono
parte de las ceremonias de la Pascua; aquella en que ciéramos por otra parte la moral enseñada por eslos
esponen el origen y ocasion de esta solemnidad, es mismos censores. Sostienen que un conquistador no
posicionquedenominan
(1 (7 C10 n.
zhaugadu, quesignifica Anun adquiere ninguna soberanía sobre una nacion venci
da sino por el consentimiento de esta última; que
hasta que sea reconocido libremente por su rey, cual
Anunciada. Nombre comun á muchas Ordenes, quier acto de autoridad que ejerza es una violencia y
unas religiosas y otras militares, instituidas para hon usurpacion; que tiene derecho á sacudir su yugo en
rar el misterio de la Anunciacion ó de la Encar— el momento que pueda. Que nos manifiesten el tratado
nacion. por el cual los israelitas habian reconocido libremente
La primera Orden religiosa de esta clase se esta á Eglon por su rey.
tableció en 1232 por siete comerciantes florentinos; es Se llama regicidio un súbdito que mata á su propio
la Orden de los servitas ó servidores de la santa Vir rey, y no el que mata á un rey enemigo para poner
gen. V. SERvTAs. en libertad á sus compatriotas. Entre los pueblos an
La segunda fue fundada en Bourges el año 1500 tiguos se creia generalmente "¿ era permitida la
r santa Juana de Valois, reina de Francia, hija de mala fé contra los enemigos del Estado. Mucio Scé
uis XI, y muger de Luis XIl; hizo anular su matri vola no fue acusado de regicida por haber intentado
onio por el Papa Alejandro VI con el consentimiento matar por sorpresa á Porsenna, que sitiaba á Roma.
e aquella virtuosa reina. Estas religiosas llevan un Ademas, cuando la Escritura dice que Dios susci—
hábito pardo oscuro, un escapulario rojo, un manto tó un libertador á su pueblo, no nos enseña que Dios
blanco y un velo negro. Su regla está fundada en doce le inspiró la mentira, ni el asesinato que cometió;
artículos relativos á doce virtudes de la Santísima Vir aunque una accion sea citada como un rasgo de valor,
gen; fue aprobada por Alejandro VI, Julio II, Leon X, no por esto es alabada como un acto de justicia.
Paulo V y Gregorio XV. El convento de Popincourt; Recordemos siempre que el Evangelio es el que
en París, pertenece á esta Orden. ha dado á las naciones cristianas las verdaderas no—
La tercera, que se denomina de las anunciadas ce ciones del derecho de gentes y del derecho político
lestes ó monjas azules, se fundó el año 160 por una tanto en paz como en guerra, que no se encuentran
viuda piadosade Génova llamada Maria Victoria For ni se han encontrado en ninguua otra parte.
naro, murió en 1617. Esta Orden fue aprobada por
la Santa Sede, y ecsisten algunas casas en Francia. Aparicion. Accion por la cual un espíritu, tal
Su regla es mucho mas astera que la de las anun. como Dios, un angel bueno ó malo, el alma de un
ciadas, fundadas por la reina Juana. Tienen el hábito muerto, se hace sensible, obra y conversa con los
blanco, el escapulario y el manto azul, y guardan la hombres. Son muy frecuentes los ejemplos de esto en
mas severa clausura. la Sagrada Escritura.
Segun la historia misma de la creacion, Dios con
ANUNCIADA. Sociedad fundada en Roma en la versó de una manera sensible con Adan y sus hijos,
Iglesia de Nuestra Señora de la Minerva el año 160 con Noé y su familia, con Abraham, Isaac, Jacob,
por el cardenal Juan de Torquemada, para casará Moisés y otros muchos profetas. Los Padres de la
doncellas pobres. Se erigió despues en archicofradia, y Iglesia suscitaron esta cuestion, á saber: si era Dios
se ha hecho, tan rica por las limosnas y los legados mismo el que se hacia presente y visible á los hom
que la han dejado, que todos los años, el 25 de mar— bres, ó si era un angel, el que hablaba y obraba á
zo, que es la fiesta de la Anunciacion de la Santísima nombre de Dios. Casi todos los antiguos estaban per
Virgen, dota á mas de cuatrocientas jóvenes con se suadidos de que era el Verbo divino, segunda per
senta escudos romanos á cada una, un vestido de es— sona de la santísima Trinidad, que preludiaba de este
tameña blanca, y un florin para chinelas. Los Papas modo el misterio de la Encarnacion; otros creyeron
han hecho tanto aprecio de esta obra de piedad, que que eran los ángeles. Es muy dificil probar de una
van á caballo acompañados de los cardenales y de la manera incontestable cualquiera de estas opinio
nobleza de Roma á distribuir las cédulas de estos nes; las dos pueden ser verdaderas segun las circuns
dotes á las que deben recibirlos. Las que quieren ser tancias. A primera vista parece que á menos de no
religiosas tienen el doble que las demás, y se distin violentar el testo sagrado, no se puede negar que el
guen por una corona de lores que llevan sobre la cabe Creador mismo haya hablado y conversado con Adan,
za. Véase Ritraccto di Roma moderna. Noé y Abraham; no es ¿ que un angel dijera,
Aod. En el libro de los Jueces se dice que los á Moisés en la zarza ardiendo: «Yo soy el Dios tu Pa
Israelitas en castigo de su idolatria, fueron subyuga dre, el Dios de Abraham»; y á los israelitas reunidos
dos por Eglon, rey de Moab, bajo cuya dominacion al pie del monte Sinaí: «Yo soy el Señor vuestro Dics
permanecieron por espacio de diez y ocho años, y que que os he sacado de Egipto»: Eacod, 20, y 1. Sin
Dios les suscitó un vengador en la persona de Aod. embargo, leemosen las Actas de los apóstoles c. 7, y.37
TOM0 l.
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que era un angel el que hablaba á Moisés sobre el pruebas de que no daban ninguna fé á todas estas ví
monte Sinaí; y S. Esteban dice á los judios: «Vos— siones; los cristianos desafiaron mas de una vez á los
otros habeis recibido una ley dispuesta por los án paganos para que hicieran obrar en su presencia á
geles», y.53. esos genios, cuyo poder tanto se ensalzaba. Tert.
¿Bajo qué figura se aparecia este angel entonces? Apolog. c. 22 y 23. Si fuéramos á creerá los viageros,
Bajo ninguna. Moisés dice formalmente á los Israeli los mágicos caraibes están con frecuencia en relacion
tas: «Cuando Dios os ha hablado en IIoreb en medio con el demonio. -

dei fuego, habeis oido su voz, pero no habeis visto Por lo que respecta á las apariciones de los muer
ninguna figura, por temer que engañados con esto, tos, nada es mas comun, bien sea entre los historia
no intentáseis representarle por algun macho ó hem dores paganos, bien en nuestros escritos de los pri
bra y le adoráseis». Deut. c., y. 12, 15, elc. Se dice meros siglos; esto fue lo que dió origen en el paganis
que Dios hablaba á Moisés cara á cara en la nube que mo á la necromancia ó arte de evocar los muertos, pa
estaba á la entrada del labernáculo; , pero cuando ra saber de ellos el porvenir; pero ninguno de estos
Moisés le dice: «Señor, si he encontrado gracia de hechos con que nuestros padres fomentaban su credu
lante de vos, mostradme vuestro rostro á fin de que lidad está fundado sobre pruebas suficientes para
os conozca... mostradme vuestra gloria; Dios le res— obligarnos á creerlos. Si tuviéramos algunas prue
ponde: «No puedes ver mi rostro, ningun hombre me bas, no tendríamos la n enor dificultad en darles cré
verá sin morir». Earod. c. 33, y. 9, 11, 13, el c. No dito. Por otra parte, las dudas que nos inspiran las
obstante, por los primeros capítulos del Génesis pa narraciones apócrifas en nada derogan la certeza de
rece que Dios para conversar con nuestros primeros los hechos referidos en los libros santos; en vano los
Padres se revestia de un cuerpo visible, pero no se incrédulos se creen con derecho para negarlo todo,
puede afirmar que fuese un cuerpo hun.ano. porque no todo está probado igualmente.
En otras circunstancias, los ángeles que hablaban 1." Los que admitan un Dios, ¿pueden acaso
á los hombres se les aparecian bajo la figura humana: poner límites á su poder, arreglar sus decretos y
asi un angel conversó en el desierto con Agar, y esta prescribir la conducta que ha debido observar res
muger creyó que era el mismo Dios. Gén. c. 1, 3. pecto de los hombres desde la creacion? Dios, sin
7 y 13. Los tres ángeles enviados para destruir á So— duda, puede revestirse de un cuerpo, es decir, hacer
doma comieron en la tienda de Abraham; uno de ellos que su presencia sea sensible, dando á un cuerpo
que le prometió un hijo, es llamado el Señor Jeo— cualquiera la palabra y accion: que este cuerpo sea
vab, c. 18, y. 13. Estas clases de apariciones de los ígneo, aéreo, luminoso ú opaco es igual; jamas po—
ángeles buenos son frecuentes en el antiguo y nuevo rá decirse que esta manera de instruir á los hom
Testamento; pero no vemos en el antiguo ningun ejem bres, dictarles leyes, y prescribirles una religion es
plode apariciones de los ángeles malos; la primera vez indigna de la sabiduria y magestad divina. Luego
que se hace mencion de ellas en la Sagrada Escritura Dios ha podido valerse de estos medios. Cómo se des
es con motivo de la tenlacion de Jesucristo en el de— mostrará que no lo ha hecho?. Una prueba de que asi
sierlo. Mat. c. , y. 1. lo verificó respecto de los patriarcas, de Moisés y de
Rara vez también se trata de las apariciones de los los demas es que nos han dejado los monumentos de
muertos. Samuel se apareció á Saul cuando este le una religion mas pura, mas sana, mas sensala y
tizo evocar por la pitonisa de Endor. I Reg. c. 28 y. verdadera que la de los demas pueblos que no tuvie
15. Judas Macabéo vió tambien al gran sacerdote ron los mismos ausilios. Solo Dios pudo revelarla.
Onias y á Jeremias que le hablaron despues de su La manera con que fue hecha, segun dicen ellos, era
muerte, pero era en sueños. II. Macab. c. 15, y. 14. la mas conveniente, pues que ha prcducido el efecto
Leemos, Mat. c. 27, y.52, que en la muerte del Sal— que Dios se proponia.
vador y despues de su resurreccion se levantaron Las apariciones de los ángeles y de los muertos no
muchos muertos de su tumba, entraron en Jerusalen ofrecen mas dificultad que las apariciones de Dios.
y se aparecieron á muchas personas. Tan facil le es dar un cuerpo á un angel, como el re
No nos detendremos en ecsaminar la multitud de vestirse con un alma humana; cuando esta última
apariciones de los espíritus referidas por los autores está separada del cuerpo, Dios puede seguramente
profanos; los filósofos de los siglos tercero y cuarto de hacerla aparecer, volverla el mismo cuerpo que tenia
la Iglesia, aferrados en la teurgia, en la teopsia y en ú otro, y ponerla en estado de egecutar las mismas
la mágia, creian, ó por lo menos fingian creer, que se funciones que practicaba antes de su muerte. Este
podia conversar con los genios ó dioses del paganis— modo de instruir á los hombres y hacerlos dóciles es
mo; que los habian visto muchos hombres, los ha— uno de los mas sorprendentes que Dios ha podido
bian hablado y recibido respuestas. Algunos Padres emplear.
de la Iglesia estaban persuadidos de que efectivamen 2 º Los materialistas mismos, que no creen ni en
te el demonio se habia hecho sensible á sus mágicos, Dios ni en los espíritus, y que niegan todos los he
con especialidad á Juliano apóstata y que Dios lo ha— chos capaces de probar su ecsistencia, raciocinan con
bia permitido para castigar su impiedad. No se puede poca consecuencia.
saber con certeza hasta qué punto la imaginacion, Bayle ha demostrado que Spinosa en su sistema del
las ilusiones del espíritu impuro ó la impostura eran aleismo no podia negar ni los espíritus, ni sus apa
llevadas en estas circunstancias. ¿Cómo nos hemos riciones, ni los milagros, ni los demonios, ni los in
de fiar de esos pretendidos filósofos, cuya mala le fiernos. Dicc. crit, Spinosa, rem. Q. y sig. Efectiva
marchaba á la par con su fanalismo? Porfirio y Jam mente, segun la opinion de los materialistas, el poder
blico, menos pertinaces que los deinas, han dado de la naturaleza, es decir, de la materia, es infinito: y
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mo lo seria sino pudiera hacer todo lo que se refiere sion necesaria entre lo que vemos en el dia y lo que
en la historia santa. Un defensor de este sistema nos aconteció en otro tiempo. Desde que no existe provi
dice que nosotros no sabemos si la naturaleza está dencia que mantenga en la naturaleza un orden cons
ocupada actualmente en producir muchos seres nue tante, nada hay que no pueda acaecer por casualidad
vos, sino está reuniendo en su laboratorio los e'emen ó por combinaciones desconocidas de la materia.
tos propios para que florezcan generaciones entera Los deistas á su vez se fundan sin razon sobre este
mente nuevas, y que no tengan nada de comun con mismo argumento. Si existe un Dios, pudo y debió
las que ya conocemos. Sisteme de la nature, t. 1, c. conducir de otra suerte al género humano en su in—
6, p.86 y 87. Luego tampoco sabemos si muchos mi fancia que en las edades posteriores. Entonces eran
llares de años antes de nosotros, no ha producido fe— recisos los milagros, las profecías, las apariciones y
nómenos singulares, y que no concebimos. Ignora as inspiraciones para establecer la verdadera reli
mos, si por algunas combinaciones fortuitas de la ma gion; una vez fundada, ya no tiene necesidad de nada
teria se encendió en la cima del monte Sinai un fuego de esto; los mismos hechos que le han servido de
terrible, de donde salió una voz, que ha dictado el prueba en su origen, le servirán hasta el fin de los si—
Decálogo. Tampoco podemos decir si por medio de glos; no es, pues, indispensable que Dios haga en el
otras combinaciones se formó repentinamente una fi— dia lo que hizo en otra época. Esta es la reflexion de
gura de hombre que condujo, protegió y colmó de san Agustin.
bienes al jóven Tobías; si por la magia ó de otra Falla mucho para que las disertaciones de Calmet
suerte salio de la tierra un espectro semejante á Sa— sobre las apariciones hayan sido hechas con la saga —
muel, que habló á Saul, etc., una vez que la natura cidad y tino que exigia una materia tan delicada. El
leza por su gran poder ha hecho hombres tales co abate Lenglet le ha vituperado mucho con razon en
mo nosotros, por qué no podia formar ángeles mucho su tratado sobre el mismo asunto, t. 2, p. 91. Este de
mas poderosos que los hombres, cuerpos ígneos ó aé muestra perfectamente que a la mayor parte de las
reos capaces de hacer cosas superiores á las fuerzas apariciones de los muertos, referidas por los escrito
humanas? -
res de los primeros siglos, les faltan muchas pruebas y
3." En buena lógica los escépticos pueden toda son inverosímiles, p.393 y sig.
via menos rechazar el testimonio de los autores sa
grados. Segun su sistema no existe ninguna conexion APARICIONES I)E ESUCRISTO DESPUES DE
precisa entre las ideas que nos vienen al entendi. SU RESURRECCON. Se dice en las Actas de los
miento por medio de las sensaciones y el estado real apóstoles, que Jesucristo despues de su resurreccion
de los cuerpos existentes fuera de nosotros: no esla se presentó vivo, á sus apóstoles, y es convenció de
mos seguros de que son realmente tales como apare ella por las pruebas que les dió en el espacio de cua
cen á nuestros sentidos. Luego el cerebro de Moisés renta dias, conversando con ellos, hablándoles del rei
pudo afectarse hasta el punto de creer, ver, oir y ha no de Dios, bebiendo y comiendo con ellos: que le vie
cer todo lo que cuenta; los cabezas de la familia de ron ascender á los cielos por sus propios ojos. Act.
Tobías pudieron hallarse en la misma situacion que c. 1. Los evangelistas nos dicen que se ¿ di
si un angel se les hubiera aparecido, les hubiera ha ferentes veces á sus apóstoles, ya separadamente, ya
blado y hecho todo lo que creyeron ver y esperimen reunidos, y á las santas mugeres ; que les habló, se
tar. Los organos de Saul pudieron modificarse del dejó tocar, que invitó al mas incrédulo de ellos á que
mismo modo que si Samuel hubiera salido realmen pusiera los dedos sobre sus llagas, que bebió y comió
le de la tumba, & Por lo tanto, nosotros obramos mal muchas veces con ellos. Estas apariciones no eran,
al sospechar de la sinceridad de los que escribieron pues, ilusiones. - -

estos hechos. A la verdad, si eran ilusiones, si todas Pero ninguno de los evangelistas se ha detenido en
estas gentes no estaban en su juicio, qué importa? referir todas estas apariciones y conversaciones, y co
Tampoco estamos nosotros seguros de que en este mo locarlas en el órden, segun el cual tuvieron lugar, y
mento nuestro cerebro y el de los escépticos no esten en detallar todas las circunstancias. S Mateo no cita
tan enfermos como el de los personages de quienes mas que dos, S. Marcos hace mencion de cuatro, San
acabamos de hablar. -
Lucas no refiere mas que cinco, S. Juan cuatro; nin
Si los incrédulos supieran raciocinar, no limitarian guno ha fijado su número. Hablaban de esto como de
jamás las fuerzas de la naturaleza ni el número de los una cosa muy conocida entre ellos, que nadie podia
posibles; serian tan crédulos como las viejas, los ni poner en duda. No creian que en los siglos posterio
ños y los ignorantes mas groseros. Los que creen en res los incrédulos desmenuzarian todas sus palabras,
la magia sin creer en Dios, no son los que racioci tratarian de buscar en ellas contradicciones, argu
nan peor. mentarian sobre la brevedad de su narracion, y se
4." El grande argumento es cuando dicen: si to quejarian de que no era muy esacta; etc, Ningun lí
do esto sucedió en otro tiempo, aconteceria ahora; es tulo, ninguna historia puede ser suficientemente cla
asi que no se ha verificado desde que progresó la ra y precisa para evitar las objeciones de los obsti
ilustracion, luego es una prueba que jamás tuvo lu nados. -

gar. Raciocinio falso. Segun la opinion de los ma La grande objecion de los incrédulos es que aque
terialistas, en otra época salieron del seno de la las apariciones no bastan para probar la resurreccion
tierra ó del mar hombres completamente formados, de Jesucristo. Habia prometido públicamente resuci
lo que no se veritica en el dia; todos vienen al mun lar, luego debia haberlo hecho en público.
do por una sucesion de generaciones regulares. Si Era preciso que se hubiera presentado á los sacer
creyéramos á los escépticos, no hay ninguna conec dotes, á los ariseos, á los doctores judios y al san
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hedrinó tribunal de Jerusalen. El testimonio de todas Pedro, á la impresion que debian hacer sobre ellos
esas gentes seria de mas peso que el de un puñado de las virtudes de los primeros cristianos, y á los azotes
discípulos seducidos. Un gobernador romano, un te terribles que Dios envió á la Judea para castigar el
trarca, un gran sacerdote judio, convertidos por la deicidio que habian cometido. Debia Dios multiplicar
aparicion de Jesucristo, hubiesen hecho mas impre. los milagros para obligará semejantes hombres á con
sion sobre un hombre de lalento, que aquel populacho vertirse. Tales han sido y serán siempre los incrédu—
ignorante que se supone haber sido persuadido por los de todos los siglos.
la predicacion de S. Pedro. ..". Aun cuando los principales judios y el sanhe
Pero hé aquíá nuestrosadversarios que se detienen drin hubieran creido en Jesucristo, qué impresion
á la mitad del camino: la resurreccion de Jesucristo ejerceria su testimonio ó sobre los romaños ó sobre los
no solo debia ser creida en Jerusalen, sino publica incrédulos modernos? Ninguna. Los romanos dijeron,
da y creida en todo el mundo. Por qué se ha de pre y repiten los incrédulos, que los judios eran igno—
tender que las demas naciones estuviesen obligadas rantes, visionarios, fanálicos y amigos de lo maravi
á creer en los testimonios de los principales de Jeru— lloso, incapaces de discernir lo verdadero de lo falso,
salen? En Jesucristo estaba el morir y resucitar en y un milagro de una ilusion. Segun el principio de
Roma, Pekin, Paris; el presentarse al universo ente— nuestros adversarios, ni los judios de la Grecia, ni
ro; el milagro habria sido mas auténtico y convincen— los de Roma estaban obligados á fiarse en el testimo
le; los hombres de talento habrian creido en el testimo nio de sus hermanos de la Judea sobre un hecho tan
nio de sus propios ojos. maravilloso é increible como es la resurreccion de Je—
De todos los argumentos de los incrédulos, acaso no sus; y atin todavia menos los paganos; todos podian
hay otro mas absurdo que este: Dios podia dar mayo— decir como los incrédulos: es razonable el exigir que
res pruebas de tal ó cual verdad, luego no bastan las creamos sobre la palabra de otro, un hecho del
que nos ha dado. Este es el punto de partida de los que Dios podia convencernos por nuestros propios
ateos; dicen que si hay un Dios, debia escribir su exis. ojos?
tencia en el cielo con caracteres luminosos y visibles 5.” Atin cuando Jesus resucitado se hubiera
para todos. resentado á los gefes de la sinagoga, cómo lo sa—
Nosotros sostenemos que Jesucristo no ha debido riamos? Por el lestimonio de los judios convertidos,
hacer lo que se exige de él ni por los judios, ni por los porque en fin, los judios incrédulos no se hubieran to
paganos, ni en favor de los incrédulos; que aun cuan— mado el trabajo de informarnos, ni de poner por es
do lo hubiera verificado no estaria mejor probada su crito un hecho que los cubriria de oprobio. Ahora
resurreccion para estos últimos, y no se encontrarian bien, los incrédulos modernos empiezan por recha
mejor dispuestos, que lo estan, para creerla. zar como sospechoso el testimonio de todos, los que
f.º Muchos establecen como principio que una re creyeron en Jesucristo. Estos son, dicen, hombres
surreccion es un hecho imposible, que ninguna prue prevenidos, seducidos, interesados en la causa de su
ba puede jamás comprobarle; otros que es un hecho maestro; son fanáticos ó impostores. Se pondrian mas
increible, que aun cuando vieran con sus propios ojos á cubierto de esta acusacion los gefes de la sinagoga
un muerto resucitado, no lo creerian. Luego es un ab que los apóstoles y evangelistas? Basta que un hecho
surdo y una pura burla por parte suya el exigir prue cualquiera ó un estimonio parezca á los incrédulos
bas que estan resueltos de antemano á no creer. Si los favorable al cristianismo, para que le rechacen sin
judios pensaban del mismo modo, como lo acreditan exámen; he aquí la principal razón que les previene
por su conducta, es claro que la vista misma de Jesu contra el testimonio que el historiador Josefo ha ren
cristo resucitado no les convenceria. No les hubiera dido á Jesucristo.
sido mas dificil decir: Es el diablo que ha tomado la 6." Por ultimo, si los grandes sacerdotes, el te—
figura de Jesus para engañarnos, como ya dijeron: trarca de la Judea, el sanhedrin en cuerpo, hubie
Por el poder del demonio es por lo que hace este hom— ran atestiguado la resurreccion de Jesucristo y crei
bre milagros. do en él, los incrédulos dirian que habia habido una
2." Es una impiedad el sostener que Jesucristo coa'icion entre todos estos personages y los apóstoles,
debia, por un esceso de bondad y por el don de la fe, que se habian convenido én hacer reconocerá Jesu
recompensar la debilidad de Pilatos que le habia con cristo por el Mesías, átin de sublevar al pueblo, hacer
denado á muerte contra su conciencia, la injusticia una revolucion y sacudir el yugo de los romanos; que
del gran sacerdote que le habia condenado como blas toda esta escena habia sido un complot de interés na
femador, la torpeza del sanhedrin que habia suscrito cional y polilico; que asi no probaba nada la preten
á la sentencia, el furor del pueblo que esclamó cruci— dida conversion de los grandes y del pueblo, etc.
ficadle, la rabia de los verdugºs que le habian cubier ¿Podrian nunca faltar razones ó pretestos al espíritu
to de oprobios y heridas. Acaso tenia Dios necesidad fecundo de nuestros adversarios para autorizar su in
de todos estos malhechores para cumplir sus de— credulidad?
signios? Dios ha sabido mejor que ellos lo que era necesario
3." Jesucristo cumplió su promesa en toda su es para convencer á los espíritus rectos y á los hom
tension: no habia prometido resucitar en público y á bres sensatos. La resurreccion de Jesucristo fue pu
la vista de los judios, ni el presentarse á ellos despues blicada, probada y creida cincuenta dias despues,
de su resurreccion incontestable. Pero los judios re en el sitio mismo en que habia sucedido, por ocho
sistieron al testimonio de los guardas, á la asevera mil judios que la predicacion de san Pedro persuadió
cion de los apóstoles, confirmada por sus milagros, convirtio. Act. c. 2, y. 1; c. , y. 6. Tales fueron
al ejemplo de ocho mil hombres convertidos por San as prinicias de la Iglesia que se formó entonces en
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Jerusalen, y que subsistió tanto tiempo como la S. Clemente. Mas arriba hemos visto que nuestras in
misma ciudad. Bien pronto se contaron muchos sa clinaciones naturales no son reputadas como pasio
cerdotes en el número de los fieles. Act. c. 6, y. 7. nes, sino cuando son l'evadas hasta el esceso. Aho
Ninguna causa podia inducirlos á creer en la resur ra bien, puede permitirse este esceso? El Evange
reccion de Jesucristo mas que la certeza incontesta lio condena terminantemente todas las pasiones, el
ble y la notoriedad del hecho: luego las pruebas eran orgullo, la ambicion, la vanagloria, aun en las
convincentes é invencibles. Tal es el punto esencial obras buenas, el apego á las riquezas, el deseo de
contra el cual no prevaleceráninguna objecion. VéA poseerlas, la inquietud por el porvenir, el deleite y
SE RESURRECCION. todo lo que á él conduce, el simple deseo de los pla
ceres prohibidos, los celos y el odio, la cólera y la
Apatía, insensibilidad; es el estado á que aspi impaciencia, el resentimiento y los proyectos de ven
raban los estóicos. Aunque los antiguos escritores ganza, la intemperancia, la molicie, la ociosidad, etc.
eclesiásticos se hayan servido algunas veces de es Jesucristo nos manda todas las virtudes opuestas;
te término para espresar la paciencia y el despren siéndonos muy fácil el probarlo en detalle. S. Cle
dimiento de las cosas de este mundo que tanto nos mente no ecsige mas, y no se le puede echar nada en
recomienda el Evangelio, es preciso no deducir de cara que no lo hayan echado los incrédulos contra
esto que Jesucristo ha querido hacer de sus discípu— Jesucristo y los apóstoles. Véase MoRAL CRISTIANA.
los otros tantos estóicos, é inspirarnos una sensibili—
dad absoluta. 1.° Estos filósofos prohibian al sabio, Apelacion al con cilio futuro. Es un es—
bajo el nombre de pasiones, las afecciones naturales pediente de que se ha echado mano en nuestra época
mas moderadas y legítimas, la amistad entre los pa para esquivar la censura de ciertas opiniones conde
rientes, la piedad para con los que padecen, el amor nadas por el Soberano Pontífice, censura aprobada
al bien público, &c. El Evangelio, lejos de prohibir— y confirmada por el sufragio de la Iglesia universal;
nos estos sentimientos, nos los ¿ bajo el pnes que á escepcion de algunos obispos de Francia
nombre general de caridad; no los desaprueba sino ningun otro ha reclamado. Es de admirar que un
cuando son ecsagerados y pueden llegará ser para modo de proceder tan estraño haya encontrado par—
nosotros una ocasion de pecado; y efectivamente, tidarios y apologistas.
las afecciones é inclinaciones naturales no deben de Los apelantes sabian bien que no habia que espe
nominarse pasiones, sino cuando nos conduzcan á rar para ellos un concilio futuro; que la Iglesia uni
sus estremos. Véase PAsoNEs. -
versal no se reuniria para juzgar si tenian ó no ra
2." Los estóicos no aspiraban á la insensibili zon, que era apelar, á un tribunal que tal vez, no
dad mas que por un principio de orgullo ; juzgaban ecsistiria jamás. La Iglesia dispersa habia aplaudido
las ¿ este mundo como indignas de afectar el muchas decisiones que la Santa Sede habia dado
alma del sabio, era una inhumanidad calculada. Jesu acerca de esta materia; ¿pudiera suponerse que la
cristo quiere que conservemos la tranquilidad del Iglesia cambiaria de creencia cuando estuviera reu
alma, por medio de la confianza en Dios, que ame nida y que la circunstancia de un concilio obraria
mos á nuestros semejantes en Dios y por Dios. una revolucion repentina en todos los ánimos? Ha si
3." Por si esta enseñanza pudiera inspirarnos du do el colmo del ridículo el creer que una apelacion
das, nos la inculcó por su ejemplo, amó tiernamente á daba el derecho de continuar enseñando la doctrina
sus parientes y amigos, derramó lágrimas sobre la censurada. Si los apelantes hubieran sido condena
tumba de Lázaro; lloró por la ruina futura de Jeru dos en un concilio habrian apelado, como todos los
salem y de los judies; no encontró á ningun desgra— hereges, al juicio de Dios.
ciado á quien no consolara, etc. esto no es el estoi Mosheim en una de sus disertaciones sobre la
CISInO. -

historia eclesiástica, t. 1, p. 581, ha demostrado per

.." Jesucristo no ha mandado la abnegacion ab—
soluta sino á los que destinaba á la predicacion del ciliables con la doctrinacatólica relativamente á la uni
Evangelio; á ningun otro de sus oyentes le aconsejó dad de la Iglesia, que los apelantes han hecho, un
el abandonar su estado y descuidar los deberes de la
sociedad; por el contrario, S. Pablo recomienda á
los que se convierten á que permanezca cada uno
en el mismo estado en que se hallaba cuando recibió
la vocacion de la é. I. Cor. c. 7, y. 20.
Se acusa á algunos Padres de la Iglesia de haber
enseñado la misma moral que los estóicos, de haber
ecsigido que un cristiano no tuviese pasiones; es uno
de los principales reproches que Barbeyrac hizo á
S. Clemente de Alejandria. Tratado de la moral de
los Padres, c. 5, S. l.
Espliquemos los términos y desaparecerá el escán
dalo. Decimos que un hombre no tiene pasiones
cuando las reprime de tal modo que nada nos las
manifiesta, y no le hacen cometer la menor falta. De
cimos que es insensible, cuando no dá señal algu
na esterior de sensibilidad. He aqui lo que quiere
fectamente que estas clases de apelaciones son incon
juego de los términos, protestando que no trataban
de derogar esa unidad por su apelacion; pero ya re—
futaremos en otro lugar lo que dice la misma obra,
á saber, que esta misma creencia, respecto de la uni
dad de la Iglesia, no puede estar de acuerdo con la
opinion de la Iglesia galicana sobre la superioridad
de los concilios generales respecto del Papa. Los par
tidarios de Quesnel no apelaban solo de la decision
del Papa á la de un concilio general, sino de la deci
sion del Papa, confirmada con el asentimiento de la
Iglesia universal. Esto es muy diferente. Véase UNIDAD
DE LA IGLESIA.
Apelante, nombre que se ha dado, á princi
pios de este siglo, á los obispos y demas eclesiásticos
ue interpusieron una apelacion al concilio futuro,
¿ la bula Unigenitus dada por el papa Clemente XI,
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condenando el libro del padre Quesnel, titulado, Re los hechos, no se han atrevido á rehusar el testimonio
fleaciones morales sobre el Nuero Testamento. de los apóstoles, antes bien lo confirmaron. ..º San
Como los apelantes se lisongeaban de imponer á la Pablo los pintó al natural. II. Tim. c., y . 4. «No po
Iglesia entera por su gran número, se solicitaban drán, dice, sufrir una doctrina sana; estarán impa —
apelaciones de la misma manera que se piden los cientes por escuchar nuevos maestros; cerrarán sus
votos de un juez ó un elector; los gefes de este oidos á la verdad, y correrán en pos de las fábulas».
partido fueron tan insensatos que llamaban á sus vo
ces el grito de la fé; por fortuna esas locas pretensio Aplicacion. Se dice, especialmente en teoio—
nes han sido olvidadas con la misma facilidad que gia, la accion por la cual nuestro Salvador nos trans
se entablaron, avergonzándose en el dia de lanto es fiere lo que mereció por su vida y muerte.
cándalo. Por esta aplicacion de los méritos de Jesucristo es
por la que nosotros debemos ser justificados y po
Apclitas ó Apelianos, como los llama S. Epi demos aspirar á la gracia y á la gloria eterna. Los
fanio; hereges del segundo siglo, sectarios de Apeles, sacramentos son los medios ó instrumentos ordina
discípulos de Marcion, pero que nosiguieron en un todo rios por los cuales se hace esta aplicacion, con tal que
las opiniones de su maestro. No admitió como él dos se los reciba con las disposiciones ordinarias y pres—
dioses ó dos principios activos y coeternos, sino un critas por el concilio de Trento en la sesta sesion.
solo Dios ecsistente por sí mismo y soberanamente La Iglesia nos los aplica tambien por el santo sa
bueno; sin embargo probablemente suponia la elerni crificio de la Misa, por sus oraciones, por las indul
dad de la materia. Segun él, el mundo no habia sido gencias y por las buenas obras que nos prescribe. Ha
hecho por este Dios bueno, sino por un espíritu de condenado á los protestantes qué dicen que esta apli
un rango inferior, cuya impotencia y poca habilidad cacion no puede sernos hecha mas que por la fé. Véa
eran causa de los ma'es que esperimentamos. ¿Pen se lMPUTACION.
saba que Dios habia creado libremente á este obrero
inhábil, ó que este provenia necesariamente de Dios A pocalipsis, del griego APoCAL YPsys revelacion,
por emanacion? Los antiguos nada de esto dicen. Por es el nombre del último libro canónico de la Escritura.
lo demas, Apeles no acusaba á este espíritu de mal— Contiene en veinte y dos capítulos una profecía
dad; por el contrario suponia que por sus oraciones relativa al estado de la Iglesia desde la ascension de
habia obtenido de Dios el enviara á su hijo sobre Jesucristo al cielo hasta el juicio final, y es como
la tierra á fin de corregir el mundo. la conclusion de todas las Santas Escrituras, á fin
No sostenia como Marcion que el hijo de Dios no de que todos los fieles, reconociendo la conformi
habia tenido mas que una carne aparente, que enga dad de las revelaciones de la nueva alianza con las
ñaba á todos los sentidos; pero decia que al bajar del predicciones de la antigua, sean confirmados en la es
cielo el hijo de Dios se habia formado á sí mismo un peranza del último advenimiento de Jesucristo. Estas
cuerpo sacado de los cuatro elementos sin encarnar revelaciones fueron hechas al apostol S. Juan durante
en el seno de una virgen; que habia padecido real— su destierro en la isla de Patmos, cuando la persecu
mente, que habia muerto y resucitado; que antes de cion de Domiciano. -

su ascension habia vuelto á los elementos el cuerpo El encadenamiento de las ideas sublimes y profé
que habia sacado de ellos; que solo su alma volvió al ticas que componen el Apocalipsis ha sido siempre un
cielo. Por consiguiente negaba lo mismo que Mar— laberinto para los mas grandes genios y un escollo
cion la resurreccion futura de la carne. No rechazaba para los comentadores. Todo el mundo sabe con qué
absolutamente como él lodo el antiguo Testamento, delirios han tratado de esplicarlo Drabicius, José
pero decia que habia en él bueno y malo ; á noso— Meda, el ministro Jurieu y el gran Newton: estas va
tros toca elegir. Se le acusa de no haber imitado la nas tentativas son las mas á propósito para humillar
continencia de su maestro, haberse entregado á las al entendimiento humano.
mugeres y aun de ser seducido por una tal Filumena, Se ha disputado por largo tiempo en los primeros
á quien miraba como á una inspirada profetisa. siglos de la Iglesia sobre la autenticidad y canonicidad
La multitud de sectas que esparcieron en el segun de este libro; pero ahora se encuentran estos dos
do siglo la diversidad de delirios forjados por sus doc puntos completamente aclarados. En cuanto á su au
tores, nos darán con recuencia motivo de hacer te— tenticidad, la negaban algunos antiguos: Cerinto, de
flecsiones. 1.º Todos estos razonadores eran filósofos
cian, atribuyó á S. Juan el Apocalipsis, para dar
procedentes de la escuela de Alejandria, ó de otra mas peso á sus delirios y para establecer el reinado
parte, que querian poner de acuerdo los dogmas del de Jesucristo por espacio de mil años sobre la tierra
cristianismo con la doctrina de Pitágoras y de Pla despues del juicio final. Véase MiLENARios.
ton, y saber mas que plugo á Dios revelarnos. 2." S. Dionisio de Alejandria, citado por Eusebio, le
Todos querian esplicar el origen del mal y ninguna atribuye á un escritor llamado Juan, diferente del
de sus hipótesis resolvia la dificultad. Si fuese Dios evangelista. Es verdad que las antiguas copias grie
el que crió libremente al hacedor del mundo previen gas, tanto manuscritas como impresas del Apocalip
do el mal que tenia que si ceder, es tan responsable sis, llevan á la cabeza el nombre de Juan el divino.
de ello como si lo hubiese hecho él mismo. Si este Pero ya sabemos que los Padres griegos daban por es
obrero ecsistió necesariamente, todo es una fatalidad celencia este sobre-nombre al apostol S. Juan para
pura, ó lo que es lo mismo, que Dios no lo pudo ha distinguirle de los demas evangelistas, y ademas por
cer mejor. 3." Aunque interesados en poner en du que trató con especialidad de la divinidad del Verbo.
da la historia del Evangelio, y al alcance de vcrifica Á esta razon se añade 1.º que en el Apocalipsis San
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Juan se encuentra designado por estas palabras: «á de Naria, muger de Noé: por los gnósticos, Niceo
Juan que ha publicado la palabra de Dios y que ha ro habla de un Apocalipsis de Esdras, Graciano y Ce
dado testimonio de todo lo que vió de Jesucristo»; dreno de uno de Moises, de otro atribuido á Sanlo
caracteres que no convienen mas que al apóstol.2." Tomás, y de otro tercero de S. Esteban, y S. Geró—
Este libro está dedicado á las siele Iglesias del Asia, nimo de otro cuarto, el que atribuian al profeta Elias.
las cuales gobernaba S. Juan. 3." Está escrito en la Porfirio en la vida de Plotino, cita los Apocalipsis de
isla de Patmos, á donde S. Ireneo, Eusebio y todos Zoroastres, de Zostrein, de Nicetea, de Alojenes, elc,
les antiguos convienen en que fue desterrado S. Juan libros de los cuales no se conoce mas que el título,
el año 95, de la que salió en 98, época que fija tam y que probablemente no eran mas que un tejido de
bien el tiempo en que se compuso la obra. ..." Por fábulas. Sixl. Seneus, lib. II. y VI; Dupin Disserta
último, muchos autores próesimos á los tiempos apos tion, prelim, tom. III; Bibliot. de los Aut. ecles.
tólicos, tales como S. Justino y S. Ireneo, Ongenes, No debe causarnos admiracion el que los calvi—
Victorino y despues de ellos una multitud de Padres nislas no hayan querido jamás reconocer la canoni
y autores eclesiásticos le al ribuyen á S. Juan evan cidad del Apocalipsis. Este libro contiene un cuadro
gelista. V. A UTENTicidAD y AUTENTico. de la litúrgia apostólica que no les es favorable. Véa
En cuanto á su cancnicidad, no está menos averi se LITURGA. En nuestros dias, Abatzil, profesor e:
guada. S. Gerónimo refiere que en la Iglesia griega. Lausana, ha hecho una disertacion contra el Apo—
aun en su tiempo, se la ponia en duda. Eusebio y san calipsis; el mas célebre de los incrédulos modernos
Epifanio convienen en lo mismo. En el catálogo de ha copiado sus objeciones en dos ó lres obras su—
libros sanlos estendido por el concilio de Laodicea, yas. Por el contrario, los anglicanos colocan este
por S. Gregorio Nacianceno, S. Cirilo de Jerusalen ibro en el número de los de la Sagrada Escritura; ha
y por algunos olros aulores griegos, no se hace nin ce poco que el sabio Lardner ha recopilado los tes—
guna mencion de él. Pero se le ha tenido siempre timonios de los antiguos acerca de esto. Credibility
como canónico en la Iglesia latina. Esta es la opinion of lhe Gospel Hietory, l. 17 p.356. Los que han ta
de S. Agustin, S. Ireneo, Teófilo de Antioquía, Meli— tado este punto de crítica sagrada, no parece sino
ton, Apolonio y Clemente Alejandrino. El tercer que han olvidado que el Papa S. Clemente, uno de
concilio de Cartago, celebrado en 397, le insertó en los Padres apostólicos, hace evidentemente alusion á
el canon de las Escrituras y desde aquella época la dos pasajes de este libro. En su primera carta á los
Iglesia de Oriente le admitió como la de Occidente. Corintios, n. 3%, se lee: «He el Señor, su re
Los alogianos, hereges del siglo segundo, recha compensa eslá con él para dará cada uno segun sus
zaban el Apocalipsis: ponian sus revelaciones en ri— obras». Estas mismas palabras se encuentran, Apoca
dículo, principalmente las de las siele trompelas, las lipsis, c. 22. y 12. La carla concluye con esas pala
bas: «A Dios por Jesucristo, gloria, honor, poder,
de los cuatro ángeles ligados sobre el Eufrates, etc. san
Epifanio, respondiendo á sus invectivas, observa que magestad, trono eterno, desde el principio de los siglos
el Apocalipsis no siendo una pura historia sino una y para siempre». Véase APoCALIpsis, c. 5, y . 13.
profecia, no debe parecer estraño que este libro esté Mas como este libro parecia favorecer el error de
escrito en un estilo figurado, semejante al de los pro los milenarios, se temió que Cerinto no lo hubiera
felas del antiguo Testamento. supuesto para establecer esta falsa opinion; esto es
La dificultad mas especiosa que oponian á la au lo que retrajo al principio á muchos catolicos, para re
lenticidad del Apocalipsis estaba fundada en lo qne conocerle como canónico. Cesó la duda cuando se vió
se dice en el capítulo 11, y 18: escribid á el án que el verdadero sentido no daba lugar á este error.
gel de la Iglesia de Tyatira; y añadian que en tiem— Para desacreditar los testimonios que deponen á
p0 del apostol S. Juan no habia ninguna lgle favor de la autenticidad del Apocalipsis, los protes
sia cristiana en Tyalira. S. Epifanio conviene en el tantes dicen que los Padres no lo admitieron, sino por
hecho y responde que al hablar el apóstol de una que eran milenarios. Todo lo contrario, los que se
cosa futura, es decir, de la Iglesia que debia estable— adhirieron á la opinion de los milenarios, no lo hicie
cerse un dia en Tyatira, ¿ de ella como de ron mas que porque creian verla demostrada en el
una cosa presenle y cumplida, segun el uso de los Apocalipsis; y los que refutaron á los milenarios, re
profetas. Groco hace notar que aunque no hubiese cibieron no obstante el Apocalipsis como un libro ca
ninguna Iglesia de paganos convertidos en Tya tira nónico; esto es lo que hizo Orijenes. Antes del si
cuando S. Juan escribió su Apocalipsis, no obstante glo tercero no puede citarse á ningun Padre que
habia una de Judios, semejante á la que se habia haya rechazado terminantemente este libro.
establecido en Tesalónica, antes de que S. Pablo pre Otra objecion de los calvinistas es que estos mis
dicara en aquella parte, mos Padres reconocieron como auténticos otros mu
Hubo muchos Apocalipsis supuestos. S. Clemen chos escritos, cuya suposicion y falsedad fueron des
le en sus Hypotyposis, habla de un Apocalipsis de cubiertas despues; que dieron fé á muchas historias
S. Pedro; y Sozomeno añade, que se leia todos los evidentemente fabulosas. Sea asi, si para probar la
años hácia las pascuas en las iglesias de Palestina. autenticidad de un libro cualquiera son necesarias
Este último habla tambien de un Apocalipsis de San testigos que hayan sido infalibles y á cubierto de lo—
Pablo, que los monges estimaban en otro tiempo, y do error, nosotros preguntamos á los calvinistas cuá
que los colos modernos se vanaglorian de poseerlo. les son los lestigos de quien se fian para creer la
Eusebio hace tambien mencion del Apocalipsis de autenticidad y canonicidad de los libros que admiten.
Adan; S. Epifanio del de Abraham, supuesto por No han calculado que al alegar esta razon, minaban
los hereges secianos, y de las revelaciones de Seth y por sus cimientos toda especie de cerleza moral,
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toda clase de pruebas para justificar hechos. l y se hace uso de los luticinios hasta el segundo dia
Una vez que los libros que al principio habían pa despues de quincuagésima en que comienza el gran
sado como auténticos, fueron reconocidos despues de ayuno de cuaresma; durante la época del apocreas
como supuestos y apócrifos, preguntamos tambien no se canta ni el triode (1) ni la aleluya.
por qué otros libros, que desde luego se tuvieron co
mo apócrifos, no pudieron despues ser reconocidos Apóerifo, del griego ApócRyPHos: término, que
como auténticos. Las mismas reglas de crítica que segun su etemologia, significa oculto.
nos hacen dudar de un hecho, cuando no está sufi En este sentido se llama apócrifo todo escrito
cientemente probado, deben hacérnoslo admitir en uardado secretamente y sustraido del conocimiento
cuanto poseamos sus pruebas. el público. Asi es que los libros de las sibilas en Ro
Esto es lo que ha sucedido respecto de muchos li ma confiados á la custodia de los decen viros; los ana
bros de la Sagrada Escritura y en particular con el les de Egipto y de Tiro, de que eran tan solo deposi—
Apocalipsis. En 397, el concilio de Cartago le co'o— tarios los sacerdotes de estós reinos, y cuya lectura
có en el catálogo de los libros sagrados, aunque los no era permitida indiferentemente á todo el mundo,
concilios anteriores no lo hubiesen aun recibido comoeran libros apócrifos. En las divinas escrituras del
canónico. antiguo Testamento, un libro podia ser al mismo
Se sabe que en el siglo cuarto, cuando volvió la paz tiempo, en este sentido general, un libro sagrado y
á la Iglesia fué una época de luz, de investigaciones y divino y un libro apócrifo sagrado y divino, porque se
sábias discusiones; se reunieron y compararon los conocia su origen, y se sabia que habia sido revelado;
monumentos de los siglos anteriores, fue interrogada apócrifo porque estaba depositado en el templo, y no
la tradicion y confrontados los testigos; lo que hasta habia sido comunicado al pueblo. Porque cuando los
entonces habia sido oscuro y dudoso, pudo declarar judios publicaban sus libros sagrados, los denomina
se cierto é incontestable. En lanto que subsistió la ban canónicos y divinos, y dejaban el nombre de
herejía de los milenarios, la Iglesia temió autorizar— apóerifos para los que guardaban en sus archivos,
la canonizando el Apocalipsis; cuando desapareció lo que no impedia que pudiesen ser sagrados y
esta secta ya no habia el mismo peligro. divinos, aunque no fuesen conocidos como tales por
Beausobre, Historia del maniqueismo, 2." part. l. el público. Asi, antes de la traduccion de los Setenta,
1.º c. 5, 55, 3, dice que las lglesias orientales del los libros del antiguo Testamento podian ser llamados
rito siriaco no reconocieron el Apocalipsis como ca apócrifos con relacion á los gentiles y á los judios; la
nónico, porque no se encuentra en la antigua ver misma calificacion convenia á los libros que no esla
sion siriaca del nuevo Testamento, de que se servian ban inscriptos en el canon ó catálogo público de las
siempre estas lglesias, pero se engaña; nosotros de Escrituras. Esto es precisamente lo que debe enten
mostraremos lo contrario en la palabra Biblias Sv derse cuando dice S. Epifanio que los libros apócri
RACAS. fos no estaban depositados en el arca entre los demas
o S" , Sabido es que Lutero negaba la autoridad escritos inspirados.
de este libro: sin el la reforma halló en él la En el cristianismo se ha dado á la voz apócrifo
imagen que le plugo acomodar al romano pontífice una significacion diferente, y se emplea para desig
y á la Iglesia: llamaba al primero la bestia de que se nar cualquier libro dudoso, cuyo autor es incierto
ace mencion en dicho libro, y con el nombre de Ba— y sobre cuya fé no se puede asegurar nada, como
bilonia designó á la segunda. Semejantes impias apli puede verse en S. Gerónimo y en algunos otros Pa—
caciones fueron seguidas de sus naturales consecuen dres griegos y latinos mas antiguos que él; asi se di
cias; asi es, que la interpretacion del Apocalipsis se ce un libro, un pasage, una historia apócrifa, etc.
convirtió en proclama sediciosa, y en ridícula men cuando hay fuertes razones para sospechar de su au
tira. Tomando la reforma en favor suyo, y con— tenticidad, y creer que los escritos son supuestos. En
tra Roma estas palabras: salid de Babilonia, é igual materia de doctrina se llaman apócrifos los libros de
mente aplicándose estas otras: haced con ella lo que los hereges, aun de los que no tienen ningun error,
ha hecho con vosotros, inferia estarla mandado, no so pero que no son reconocidos como divinos, es decir,
lamente salir de Roma, sino esterminar á mano ar que no se han colocado ni por la sinagoga, ni por
mada á todos los católicos por do quiera los encon— la Iglesia en el canon para ser leidos en público en
trase, persuadida de alcanzar la victoria. Con seme— las reuniones de los judios ó de los cristianos.
jantes sanguinarias interprelaciones, acreditó la re En la duda de si un libro es canónico ó apocrifo,
forma su espíritu de rebelion y su anhelo por las si debe tener autoridad ó no en materia de religion,
guerras, que antes habia asegurado detestar. No hay se echa de ver la necesidad de un tribunal superior
enemigos declarados del romano pontífice y de la é infalible para fijar la incertidumbre de los enten
Iglesia á quienes no pinte la reforma como fieles tes dimientos: y este tribunal es la Iglesia á sola la
tigos de la verdad perseguida por la bestia. En el cual corresponde dar á un libro el título de divino,
número de estas víctimas, cuenta á los Valdenses, ú desecharle como supuesto.
Albigenses, Wiclef, Juan Hus, y á todos los de suLos católicos y los protestantes han tenido dispu
temple, inclusos los crueles Taboritas. tas muy fuertes sobre la autoridad de algunos libros,
ue estos últimos tienen como apócrifos, como Judiht
Apocreas. Es la semana que corresponde á la ¿ y los Macabeos; los primeros se fundan en
¿ nosotros llamamos septuagésima. Los griegos la los antiguos cánones ó catálogos, y en el testimonio
aman apocreas ó privacion de carne, porque des uniforme de los Padres; los otros en la tradicion de
pues del domingo siguiente se deja de comer carne (1) Triode, himno de tres estrofas, usado en la Iglesia griega.
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algunas iglesias. La cuestion es saber, si la opinien los apocalipsis falsos, son ó imposturas hecnas fia
de un pequeño número de iglesias particulares debe liciosamente por hereges, con el designio de estable—
prevalecer sobre la del mayor número. cer sus errores, y que no merecen la menor atencion;
Los libros reconocidos como apócrifos por la Igle ó historias hechas incesantemente por escritores mal
sia católica que no están verdaderamente inscritos instruidos y demasiado crédulos pero que no tenian
en el canon del antiguo Testamento, y que en el dia la mas mínima intencion de engañar; una parte de
se tienen como tales, son la oracion de Manassés, que esas diferentes producciones apareció en el segundo
está al fin de las biblias comunes; el tercero y cuar— siglo; las demas no nos fueron conocidas mas que
to libro de Esdras, y el tercero y cuarto libro de los por el decreto de Gelasio, dado á fines del siglo V.
Macabeos. Al fin de Job se encuentra una adicion en el No debe confundirse todo esto.
griego, que contiene una ¿? de este perso— 2.” Convenimos en que la autenticidad de la
nage, con un discurso de la muger del mismo; se Carta de Abgaro no es incontestable, que no es ab—
ve tambien en la edicion griega un salmo que no se solutamente cierto que los apóstoles hayan por sí
encuentra en el número de los ciento cincuenta; y al mismos compuesto el símbolo que lleva su nombre,
fin del libro de la Sabiduría un discurso de Salo asi como las liturgias que les han atribuido y los cá
mon , sacado del octavo capítulo del tercer libro de nones denominados Cánones de los apóstoles; pero
los Reyes. Ya no tenemos el libro de Enoch, tan cé estos escritos son apócrifos en el mismo sentido que
lebre en la antigüedad; y segun S. Agustin se su los anteriores? El símbolo es verdaderamente el com
puso otro lleno de ficciones, que todos los Padres, á pendio de la doctrina de los apóstoles; sus liturgias
escepcion de Tertuliano, han tenido como apócrifo. son muy antiguas, y se pusieron en práctica desde
Es preciso tambien colocar en la clase de las obras los primeros siglos en muchas iglesias; los cánones
apócrifas el libro de la Asuncion de Moises, y el de apostólicos son la obra de los primeros concilios, y
la Asuncion ó Apocalipsis de Elias. Algunos judíos un monumento de la disciplina seguida por entonces
han supuesto libros bajo el nombre de los patriarcas, en la lglesia. Son monumentos respetables, que no
como el de las Generaciones eternas, que atribuian á se pueden desechar sin temeridad.
Adan. Los ebionitas habian supuesto igualmente un ." Sostenemos que el Pastor de Hermas, la
libro titulado la Escala de Jacob, y otro que tenia por Carta de S. Bernabe, las dos Cartas de S. Clemente,
título La genealogia de los hijos y de las hijas de Adan, las siete Cartas de S. Ignacio, son auténticas, son
obras imaginadas ó por judíos amantes de las ficcio— verdaderamente de los autores á quienes se atribu=
nes, ó por los hereges, que por este artificio sembra yen, pero no deben colocarse al nivel de los libros
ban sus opiniones é investigaban su orígen hasta una sagrados ó de las Escrituras canónicas; en este senti
antigüedad propia para imponer á ojos poco pers do es en el que únicamente pueden llamarse apócri
picaces. - - fas. Hablaremos de estos diversos escritos bajo sus
Cuando la Iglesia ha declarado un libro apócrifo y propios nombres, lo mismo que del célebre pasage
le ha escluido del canon de las Escrituras, no ha de Josefo, de los libros de las sibilas, etc.
pretendido decidir por esto que sea un libro sin au Una vez hechas todas estas distinciones, ya no
ioridad y supuesto bajo un nombre falso. Asi el Pas puede causar admiracion el gran número de escritos
tor de ¿ ue muchos Padres antiguos coloca supuestos en los primeros siglos y en los siguientes,
ron en la misma clase que los libros sagrados, no tie porque se ven las causas de las diferentes especies
ne en el dia la misma autoridad; de aqui no se de de suposiciones; es muy fácil el demostrar que la
duce que sea falsamente atribuido á Hermas, y ab multitud de libros desechados como apócrifos no pue
solutamente indigno de crédito. Muchos críticos, den ocasionar el menor perjuicio á la autenticidad, ó
aunque instruidos por otra parte, parece que no han canonicidad de los demas; resulta de esto que el jui
hecho esta distincion; una obra se considere cio de los críticos antiguos ó modernos no es una re
como apócrifa han deducido que era la produccion gla infalible, que la única decision que es digna de
de un impostor. fé sin peligro de errar, es la de la Iglesia.
Esta es la equivocacion en º:
parece haber caido ¿ pretende que la multitud de libros apó
el autor de una memoria sobre las obras apócrifas su crifos supuestos en el segundo y tercer siglo de la
puestas en los primeros siglos de la Iglesia. Mem. Iglesia, provino del método de disputar que se intro
de l' Academ. des Inscript.t. XXVII, in-. p. 95, dujo entre los Padres y doctores de aquellos tiempos.
que ha sido copiada por el autor del Erámen crítico Segun su opinion los doctores cristianos, educados
de los apologistas de la Religion cristiana, c. 2. Pone en las escuelas de los retóricos y de los sofistas, no
poco mas ó menos al mismo nivel los libros notoria tuvieron el menor escrúpulo en adoptar la máxima
mente supuestos y forjados por los hereges, los escri de los platónicos, que pensaban que era permitido
tos cuyos autores no son conocidos á ciencia cierta, el emplear la mentira é impostura para sostener la
pero que no encierran ningun error, y las obras cu verdad. Por lo tanto los escritores eclesiásticos, al
yos autores son conocidos, pero que no deben colo disputar contra los paganos y los hereges se ocupa.
carse en el canon de los libros sagrados, porque el ban mas de vencer á sus adversarios ó de reducirlos
papa Gelasio los ha declarado todos apócrifos. Sin al silencio que de demostrarles la verdad, y esta ma
embargo es evidente que hay una gran diferencia nera de tratar las controversias fué llamada econó—
entre unos y otros. mica. Se supusieron libros bajo nombres respetables;
Convenimos primero en que los falsos evangelios se emplearon fraudes piadosos, etc. Hit. ecl. del se -
publicados bajo los nombres de S. Pedro, de Santia gundo siglo 2."part. c. 3, S. 15; tercer siglo, 2." par
go, S. Matías etc., las actas falsas de los apóstoles, te, c. 3, S. 10.
T0MO 1, 23 -
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En la palabra EcoNoMA refularemos esta calumnia En general cualquier escritor adopta con facilid, r
forjada por los protestantes, por necesidad de siste— y sin mucho exámen una historia, un monumento,
ma, para deprimir la autoridad de los Padres de la un libro que le parece favorable á su opinion; le ci
Iglesia, y adoptada ávidamente por los incrédulos la con confianza cuando no ve una razon para sospe
modernos; haremos ver que estos acusadores teme char de él, y su error contribuye á engañará otros
rarios han prestado á los doctores cristianos su pro sin que él lo quiera. Esta fragilidad es comun á los
pio ¿ y su método de disputar. Al hablar del se católicos y á los hereges, á los eclesiásticos y á los
gundo siglo , Mosheim no se atrevió á confirmar esta profanos, á los incrédulos y á los creyentes; es pro—
imputacion: «Se obraria mal, dice, atribuyendo to io de la humanidad, y durará tanto como ella ; con
dos estos fraudes piadosos á los verdaderos cristia recuencia no les guia ni la malicia ni la mala fé, es
nos; la mayor parte de las obras apocrifas fueron la una preocupacion. ¿Es justo el querer que los escri
produccion del ingenio fértil de los gnósticos; pero tores eclesiásticos se encuentren exentos de esta de
no me atreveria á asegurar que los verdaderos cristia bilidad? Cuando acusamos á nuestros adversarios de
nos estuvieron exentos de este defecto.» En el tercer mala fé, esclaman que es una calumnia, y ellos mis
siglo, fué mas atrevido; acusa á los contraversistas mos no cesan de formular esta acusacion contra los
de haber supuesto los cánones de los apóstoles, las personages mas respetables, sin ninguna prueba. Véase
constituciones apostólicas, las recogniciones de San AUTENTICIDAD, CANoN, CANóNico.
Clemente y las Clementinas.
Felizmente la calumnia se desmiente en este caso Apoerisario ó Aprocrisiario, correspon
por sí misma; por confesion de Mosheim los cánones de á diputado, enviado; palabra griega derivada de
de los apóstoles encierran la disciplina seguida en la APoCRyNoMAy, yo respondo. Se llamaba asi en la Igle
Iglesia durante el segundo y tercer siglo: ahora bien, sia griega á los eclesiásticos enviados á la ciudad im
en aquella época se hizo profesion de seguir lo que perial por las iglesias, por los obispos ó por los mo
los apóstoles habian establecido en las iglesias que nasterios, para proseguir los negocios que tenian en
fundaron; ¿en dónde está la falsedad, en dónde el la corte. Justiniano prohibió por medio de una ley á
fraude, por haber llamado cánones apostólicos á las los obispos el que se ausentasen por mucho tiempo
reglas que transmitian por escrito la disciplina que de sus diócesis sin órden espresa suya, y les manda
se creia y se sabia haber sido establecida por los ba enviar el apocrisario ó el ecónomo de su iglesia á
apóstoles? Es mas que probable que estos cánones la corte cuando tuvieran negocios que tratar. Des
no fueron reunidos y recopilados hasta el cuarto si pues llamaron tambien los emperadores apocrisarios
glo; luego no puede ser un fraude del siglo tercero. á sus embajadores y enviados; pero es preciso no
L0 mismo acontece con las constituciones apostó confundirlos con los diputados eclesiasticos. Bingham,
licas, las recogniciones y las clementinas; no se ve Origin. eccles. l.3, c. 13, S.6; Justin. Novel VI, c. 2.
el menor vestigio de ellas en los autores del tercer si
glo. Han existido muchos escritores llamados Cle Apodipuo. Asi llaman los griegos el oficio de
mentes: si se atribuyeron por equivocacion á S. Cle completas. V. HoRAs CANóNICAs.
mente de Roma las obras de otro Clemente, de esto
solo se deduce que hubo falta de descernimiento y de Apolimarlos ó Apolimaristas. Antiguos
crílica y no que se pecó de mala fé. En los primeros hereges que pretendian que Jesucristo no habia to
siglos y aun casi en los nuestros, se han dado bajo el mado un cuerpo de carne como el nuestro, ni un al
nombre de S. Agustin sermones, tratados y comen ma racional semejante á la nuestra.
tarios que no eran ¿ La crítica ya mas ilustrada Apolinar de Laodicea, gefe de esta secta, daba á
y circunspecta descubre todos los dias esta clase de Jesucristo una especie de cuerpo con el que el Verbo
errores; esto se verifica tanto con respecto á los auto habia sido revestido para toda la eternidad: cuerpo
res profanos, como con los escritores sagrados y los impasible que habia bajado del cielo al seno de la
Padres de la Iglesia. Es una pertinacia y malignidad Santísima Virgen, pero que no nació de ella; que
el querer que todas estas equivocaciones sean impos— por lo tanto Jesucristo no padeció, ni murió y resu
turas reflexionadas mas bien que faltas de ignorancia citó sino en apariencia. Establecia una diferencia
y de preocupacion. entre el alma de Jesucristo y lo que los griegos lla.-
En los artículos CoNstrTUCIoNEs APostóLICAs, man voos, espíritu; entendimiento; por consiguiente
EvANGELio, HERMAs, SIBvLAs, etc. haremos ver que la decia que Cristo habia tomado un alma, pero sin en
mayor parte de las suposiciones de los libros apó tendimiento; falta, decia él, suplida por la presen
crifos han podido hacerse muy inocentemente; que cia del Verbo. Entre estos sectários los habia que
todas aquellas que fueron reflexionadas y maliciosas afirmaban decididamente que Cristo no tomó alma
han sido la obra de los hereges y de los filósofos, y humana. Se les dió el nombre de Sinousiastas, del
no de los doctores de la Iglesia; que el mayor número mismo modo que á los euliquianos y á todos los que
fueron posteriores al tercero y aun al cuarto siglo. confudian las dos naturalezas de Jesucristo en una
Beausobre, aunque enemigo declarado de los Padres sola. V. SnoUsIAsTAs.
de la Iglesia, conviene en que la mayor parte de los Apolinar reprodujo la heregía de los milenarios, y
libros falsos que aparecieron antes, los forjó un cierto enseñaba otros errores acerca de la Trinidad. Teodo
Leucio Carino, herege de la secta de los docetas. Hist. reto le acusa de haber cunfundido las personas en
del Maniq. t, 1., l. 2, c. 2, p. 348. Las sospechas y Dios, y de incurrir en el mismo error que los sabe
acusaciones de los protestantes, copiadas por los incré lianos. S. Basilio le echa en cara por otra parte el
dulos, son pues temerarias y sin ningun fundamento. abandonar el sentido literal de Escritura, y
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hacer los libros santos enteramente alegóricos. tos, etc. Para contestar al crímen que les imputaba de
La heregia de Apolinar consistia, como vemos, en no tener amor ni ser fieles á la patria pretestando que
distinciones muy sutiles que eran incomprensibles rehusaban el hacer los juramentos ordinarios, y jurar
para el comun de los fieles; no obstante, la historia por los dioses tutelares del imperio, prueba la sumi
eclesiástica nos dice que hizo progresos considerables sion de los cristianos á los emperadores. Espone
en Oriente; muchas Iglesias de aquella parte del mun tambien la doctrina cuanto es necesario para discul
do se vieron infestadas con dicha heregia. Fue anale parla, pero sin descubrir con demasiada claridad los
matizada en un concilio de Alejandria en tiempo de misterios para no violar el secreto de la religion tan
S. Atanasio en 360; en otro celebrado en Roma bajo espresamente recomendado en los primeros tiempos.
el pontificado de Dámaso en 374, y en el general de Este escrito, aunque bien fundado, no hizo el mayor
Constantinopla en 381. Los apolinaristas se llamaron efecto, y no fue menos violenta la persecucion de
tambien dimeritas ó separadores porque separaban el Severo.
alma de Jesucristo del entendimiento, error que pro La mejor edicion de esta obra es la de Leyda en
venia sin duda alguna de la opinion de Platon que 1718, en 8", con notas de Havercamp, y la mejor
distinguia el alma sensitiva de la racional. traduccion es la que ha dado recientemente Mr. el
Es preciso no confundir el herege de quien habla abate Gourcy.
mos con Apolinar obispo de Hieraples que vivió en el
siglo segundo, y presentó el año 177 al emperador Apología, Apologistas. Hemos perdido
Marco Aurelio una apología del cristianismo. Algunos muchas apologias de la religion cristiana, hechas por
autores dicen que el de Laodicea escribió contra Ju autores del siglo II de la Iglesia, lo que puede sen
liano Apóslata. tirse con justa razon: las de Cuadrato, obispo de Ate
o GS" . Dos de los discípulos de Apolinar, Vital y nas, de Meliton, obispo de Sardica, y de Apolinar
Timoteo fueron obispos de la secta, uno en Antioquia obispo de Hieraples. No creemos estará de mas el que
y otro en Alejandria. Los concilios celebrados en am demos la lista de las obras de nuestros antiguos apo—
bas ciudades recibieron los decretos de Dámaso con logistas que subsisten todavia.
tra Apolinar; y á su vez fueron recibidos tambien por Las dos apologías de S. Justino y su diálogo con el
el concilio general de Constantinopla. Este heresiarca judio Trifon. El discurso á los gentiles por Taciano.
llegó á una edad muy avanzada, y murió hácia el año La sátira contra los filósofos paganos, por Hermia,
381. Es aulor, juntamente con su padre, de muchas La embajada de Atenágoras para los cristianos. Lo\
obras en prosa y verso, sagradas y profanas. En la tres libros de S. Teófilo, obispo de Antioquia, á An
biblioteca de los Padres se halla su interpretacion de tolyco. La carta á Diogeneles. Todas estas obras se
los salmos, en verso, que contiene máximas erróneas encuentran en la nueva edicion de las de S. Justino;
sobre Jesucristo. En las obras de S. Gregorio Na pertenecen al II siglo.
cianceno hay una tragedia de Jesucristo padeciendo, La exhortacion de S. Clemente de Alejandria á los
que se cree ser de Apolinar. Compuso estas piezas á aganos. El apologético de Tertuliano, sus libros á
fin de que los cristianos pudiesen aprender las bellas as naciones y á Scápula, gobernador de Cartago; su
letras, sin el auxilio de los autores profanos. Escri libro contra los judios. La disputa de Arnobio contra
bió en versos heróicos, y á imitacion de Homero, la los paganos, en seis libros; el diálogo de Minucio Fe
Historia sagrada hasta Saul, dividida en veinte y lix, titulado Octavio; Julio Firmico Materno sobre los
cuatro libros, segun el órden del alfabeto griego: in errores de las religiones profanas.
tencion loable, dice Feller, aunque el éxito no haya Los ocho libros de Orígenes contra Celso. Las ins
correspondido, V mas le habria valido estar alerta tituciones divinas de Lactancio, en siete libros. La
contra el error, que tratar de preservar á los demas. preparacion y demostracion evangélica de Eusebio,
y su libro contra Hierocles. El discurso de S. Atana
Apolítico. Es una especie de terminacion de las sio contra los paganos. La terapéutica de Teodoreto.
principales partes del oficio divino en la Iglesia grie Los diez libros de S. Cirilo de Alejandría contra Ju
ga. Varía segun los tiempos. La voz apolítico está com liano. Los discursos de S. Gregorio Nacianceno con
puesta de APo y de Lyo, yo desato, yo concluyo, etc. tra el mismo emperador.
El tratado de S.Cipriano sobre la vanidad de los
Apologético. Escrito ó discurso hecho con el ídolos y su carta á Demetrio. Los discursos de S. Juan
objeto de escusar ó justificar una persona ó una ac Crisóstomo contra los gentiles y los judios. Los veinte
cion. Véase ApologiA. y dos libros de la ciudad de Dios de S. Agustin; su
El apologético escrito por Tertuliano para la de tratado de la verdadera religion, y el de las costum—
fensa del cristianismo, es una obra llena de vigor y bres de la lglesia contra los maniqueos.
elevacion digna del carácter vehemente de su autor. La disputa de Evagro entre el judio Simon y el
Dirige en él la palabra á los magistrados de Cartago, cristiano Teófilo. El libro de las consultas de Zaqueo
á los grandes del imperio, y gobernadores de cristiano, y de Apolonio filósofo. El tratado de san
las provincias. Fulgencio sobre la fé. Los tratados dogmáticos de
Tertuliano trata de demostrar la injusticia de la S. Isidoro de Sevilla; el de la fé ortodoxa, por san
persecucion contra una religion que se condenaba sin Juan Damasceno. Los diálogos entre un cristiano y
conocerla ni entenderla, de refutar la idolatria y los un judio, un nestoriano y un sarraceno, por Teodo
vituperios odiosos que los idólatras echaban en cara á ro de Abucara. El monólogo y prólogo de S. Ansel
los cristianos, tales como el degollar los niños en sus mo sobre la existencia de Dios. Dos obras contra los
misterios, y comer la carne humana, cometer inces judios, por Pedro de Blois.
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El libro de Raimundo Martin, titulado Pugio fidei, como las apologías que compusieron muchos protes
contra los judios, fue publicado por Galatino en su tantes en el orígen de la pretendida reforma.
obra de Arcanis catolica veritatis. Por lo menos es indispensable que las de S. Justino
No se puede acusar á los primeros apologistas del fuesen presentadas á los emperadores, porque la pri
cristianismo de haber disfrazado los hechos; Cuadra mera va seguida de un rescripto de Adriano á Mi
to, Meliton, S. Justino y Minucio Felix, estaban nucio Fundano, y una órden de Antonino á los co
rodeados de enemigos que podian, cuando hubieran munes del Asia, para prohibir la persecucion de los
querido buscar pruebas y testigos para confundir la cristianos por motivo de religion, á menos que no
impostura, siestos escritores animosos hubieran aven fueran culpables de otros crímenes. Unos hombres
turado la mas pequeña mentira. Examinaron por sí que siempre estaban prontos á morir por su religion,
mismos las pruebas de la religion, porque eran filó no podian temer el dar á luz la apologia que ha
sofos ú ¿ instruidos; bebian en el manantial bian compuesto. Pero respecto de este hecho, asi co
de los acontecimientos, y habian sido convertidos por mo de los demas, nuestros adversarios se contradi
los apóstoles ó sus discípulos inmediatos. El cristia cen todavia: tan pronto acusan á los cristianos de
nismo era perseguido, y de consiguiente no les mo haber ido á provocar la cólera de los jueces paganos
via el interes temporal para abrazarle. S. Justino á sus mismos tribunales, como creen que aquellos
confirmó por su martirio la sinceridad de su creencia. hombres, deseosos del martirio, no se atrevieron á
Tampoco se puede decir que pasaron en silencio ó presentar ni aun las mas sabias y respetuosas repre
debilitaron las razones y objeciones de sus adversa— sentaciones. La verdad es, que estas dos acusaciones
rios. Orígenes refiere las mismas palabras de Celso; estan tan mal fundadas la ana como la otra.
S. Cirilo copia exactamente las palabras de Juliano. Mosheim que no desaprovecha ninguna ocasion pa
Sin esta buena fé, no hubiera llegado hasta nosotros ra deprimir á los Padres de la Iglesia, dice, hablan
una sola frase de las obras de estos dos filósofos. Las do de nuestros apologistas del II y III siglo, que ata
confesiones que se vieron obligados á hacer, son to caron con mucho juicio, destreza y buen éxito, la
davia el escudo que oponemos á los ataques de los supersticion pagana, pero que no fueron tan felices
incrédulos modernos. Convienen espresamente en los al desenvolver la verdadera naturaleza y genio del
milagros de Jesucristo y de los apóstoles ó bien la cristianismo; que sus apologias son defectuosas bajo
manera con que los combaten equivale á una confe muchos aspectos; que no estuvieron afortunados mu
sion formal. -

chas veces en la eleccion de los argumentos; que la

Algunos incrédulos, con el objeto de esquivar las mayor parte pecan por falta de penetracion, erudi
consecuencias de estos testimonios, dicen que los pri cion, órden, exactitud y fuerza; que emplean con fre
meros escritores eran filósofos platónicos; que abra cuencia argumentos fútiles, mas apropósito para des
zaron el cristianismo, porque encontraron cierta se lumbrar la imaginacion que para convencer al enten
mejanza entre sus dogmas y los de Platon; que una dimiento. El uno, dice, abandonando los libros santos
vez convencidos de la doctrina, no trataron de com de donde debia sacar las armas para defender la reli
probar los hechos y los admitieron sin examinarlos. tion, se refiere á las decisiones de los obispos que go
Desgradaciadamente para ellos esta conjetura se halla ¿ las Iglesias apostólicas; otro, imaginando
desmentida por otros críticos ¿ sostienen, que los que la antigüedad de una doctrina es una prueba de su
antiguos Padres de la Iglesia fueron los que introdu verdad, hace prevalecer la prescripcion contra estos
jeron en el cristianismo las ideas de Platón; luego no adversarios, como si tratara de defender su propiedad
labia tenido lugar esto antes de su conversion. Si delante de un magistrado civil; otro tercero empa
el platonismo cristiano era obra suya, no pudo ser la pado en ideas cabalísticas, alega el poder imaginário
causa de su conversion. -
de ciertos nombres ó términos místicos. De esto de
Acaso tomaron de Platon los Padres la unidad de duce Mosheim que en el II siglo, fue en el que se in
un Dios criador, el pecado original, y la redencion trodujo el método vicioso de disputar que se llama
del mundo verificada por medio de un Dios hecho económico, por medio del cual se trataba de estra
ihombre? Estos dogmas estan tan poco de acuerdo viar y confundir mas bien á un adversario, que de
con los de Platon, que Celso y Juliano no cesaron de mostrarle la verdad. Hist. ecles. del II siglo, 1.” parte
oponer la doctrina ¿ este filósofo á la del cristianis c. 3, S. 7 y 8.
mo. A los hereges de su tiempo es á los que Tertu— ¿Más no es el mismo Mosheim el que falta á la rec
liano echa en cara el furor de querer sustituir los titud y al juicio en este caso? 1 º La contradiccion
delirios de Platon y de los demas filósofos á las lec— es palpable entre el elogio que hace al principio de
ciones de Jesucristo y de los apóstoles. V. PLAToxismo. nuestros apologistas, y los vituperios con que los em
Lejos de pasar ligeramente por los hechos, Oríge onzoña. Si estas acusaciones son verdaderas, su tra
nes los cita contínuamente á su adversario: ninguno ajo es detestable; en qué sentido atacaron la supers
ha sostenido la verdad de los milagros de Jesucristo ticion pagana con mucho juicio, destreza y suceso?
y de los apóstoles con mas energía que él; sin em 2.º. De qué peso hubieran sido, para defender la
bargo es uno de los Padres, á quien se han supuesto religion los argumentos sacados de la Escritura San
mas ideas platónicas. ta, contra paganos que no creian en ella y que la
Otros críticos han conjeturado que las represen miraban como una coleccion de delirios y de fábu
aciones de nuestros antiguos apologistas no fueron las? Eran precisos pues para convencerlos de la ver
nunca presentadas ni á los emperadores, ni á los go dad y divinidad de estos libros, argumentos sacados
bernadores de las provincias, que estos escritos per— de otra parte. Mosheim mismo hubiera tomado esta
manecieron ocultos en las carteras de sus autores determinacion si se hallara en el caso de probar el
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cristianismo contra un filósofo pagano. Pero lal es la de Atenágoras, etc., que han hecho los sabios edito—
pertinacia de los prolestantes: porque, segun su opi res de las obras de S. Justino, verá que es falso que
nion ; nada es verdad mas que lo que está escrito, estos autores no tengan orden, método, penetración,
y la Escritura es el solo órgano de la revelacion, juz erudicion y fuerza. Lo mismo acontece en la Ear
gan que los Padres del II siglo, que pensaron de di hortacion á los gentiles de S. Clemente de Alejandria,
ferente manera, se equivocaron y no conocieron la cuyo analisis se halla en la edicion de Potter, p. 1."
naturaleza y verdadero genio del cristianismo. Si se en las nolas. En la palabra CELso, daremos el de la
habla del cristianismo protestante, nada es mas cier obra de Orígenes contra este filósofo.
to; pero aquellos Padres, instruidos por los discípu Nada hay mas injusto ni temerario que la censu
los inmediatos de los apóstoles, comprendieron muy ra de Mosheim, adoptada ciegamente por los proles
bien y desarrollaron la verdadera naturaleza y el ge tantes, para ponerse á cubierto de una objecion que
nio del cristianismo apostólico que no es el de los pro les quebranta. Nos persuadirán que en el segundo si
leslantes.
glo, inmediatamente despues de la muerte de los após
3." Una de las principales preocupaciones de los toles se habia olvidado la verdadera naturaleza y el
paganos contra nuestra religion, era el pretender que genio del cristianismo?
esta religion era nueva y desconocida para todos los
sabios de la antigüedad; estaban en la persuacion de Apolonio de Tyanes. Filósofo pitagórico que
que debian encontrarse todas las verdades entre los vivió todo el primer siglo, célebre por la historia ro
griegos. Para destruir esta prevencion, S. Jutino, mancesca que Filostrates, otra especie de filósofo,
Taciano, Atenágoras y S. Clemente de Alejandria, hizo de él cien años despues de su muerte.
se dedicaron todos á probar que la doctrina de Moi Todo el mundo sabe que el cristianismo no tuvo
ses respecto á la Divinidad, doctrina que es la base enemigos mas declarados que los filósofos; se valie—
del cristianismo, es mucho mas antigua que la de to ron de toda clase de engaños para estraviar á los
dos los escritores griegos, y que Moises la enseñó hombres y sostener la idolatria próxima á estinguir—
muchos siglos antes de que existiese la suya. Hacen se. Como viesen que los milagros de Jesucristo eran
ver que los autores griegos mas antiguos y mas esti una de las mejores pruebas de que se servian nues
mados estan de acuerdo con Moises con respecto á la tros apologistas para demostrar la divinidad de nues
unidad de Dios, la creacion del mundo, la forma tra religion, y que hacian mas impresion sobre los
cion del hombre, etc. Estos Padres podian responder paganos, trataron de atribuir prodigios semejantes á
mas directamente y con mas solidezá la pretendida algunos filósofos, y en particular á este de quien ha
prescripcion en que se fundaban los paganos? blamos.
4.”. Otra preocupacion esparcida aun entre los Hácia el año 211, la emperatriz Julia , Domna
filósofos, era el creer que habia palabras eficaces, pe muger de Severo Séptimo, princesa muy desarre
ro que no obraban nada si no eran pronuciadas en glada y apasionada por lo maravilloso, encargó á
la lengua original. Orígenes se sirve de esta opinion Filóstrates el escribir la vida de Apolonio Tyano.
para refutar ciertas objeciones de Celso contra los Este sofista la escribió á su gusto. Si se comparan los
exorcismos y milagros que obraban los cristianos prodigios que refiere de su héroe con los que los
por medio de las palabras; no vemos en donde está el evangelistas han atribuido á Jesucristo, se ve que
crimen. En todos tiempos se ha permitido el hacer á Filóstrates se propuso copiar estos últimos, y obscu
un adversario un argumento personal, que se llama recer su esplendor con los muchos que atribuye á
argumento ad hominem , sacado de los principios y Apolonio, pero añade tantas circunstancias fabulo
de las opiniones de aquel contra el cual se disputa. Se sas, tantos absurdos y contradicciones, que no guar
sigue de aqui que por este método se trate mas bien da la menor verosimilitud: de lo que cuenta, todo
de confundir á un hombre que de demostrarle la ver lo mas que se deduce es que Apolonio era un mágico
dad? la manera mas eficaz de convencerle es el ata— que fascinaba la vista, y se aprovechaba de la im
carle con sus mismos principios. becilidad de sus admiradores, para hacerse una re
5.º Tertuliano es el que en sus Prescripciones con— putacion. - -

tra los hereges, se refiere á las deciciones de los obis Muy preciso le era, el que su historiador le pin
pos que gobernaban las iglesias apostólicas, pero en tase como un hombre muy virtuoso; prescindiendo
tonces no disputaban contra paganos. Se trataba de de los esfuerzos que hizo para escitar sediciones con
saber cuáles eran los libros canónicos ó divinos; si los tra Neron y Domiciano, no se ve en él mas que un so
nuestros estaban falsificados ó los de los hereges; qué fista orgulloso, que no busca sino la celebridad d te
sentido debia dárseles. Nosotros sostenemos tambien no se ocupa en manera alguna de la reforma de las
con Tertuliano, que estas cuestiones no podian resol costumbres. -

verse sólidamente, sino por el testimonio de los obis— Bajo el reinado de Diocleciano, Hiérocles, presi
pos que gobernaban las iglesias apotólicas; y que dente de Bitinia y despues gobernador de Alejandria,
este testimonio era irrecusable. En la palabra PREs gran enemigo de los cristianos, compuso una obra
CRIPcioN, demostraremos que este argumento inven para probar que Apolonio era un personaje mayor
cible en el siglo III, no lo es menos en el dia, y que ue Jesucristo, y opuso los pretendidos milagros del
no es verdad, como pretende Mosheim, que esta ma filósofo á los de nuestro Salvador. Eusebio de Cesa
nera de disputar pueda perjudicar á la causa de la rea refutó este paralelo ridículo; demostró que to
verdad. das esas maravillas no fueron referidas ningun
6.º. El que se quiera tomar el trabajo de leer el testigo ocular, que nadie se habia acordado de ellas
analisis de las apologias de S. Justino, de Taciano, en todo el siglo que trascurrió desde la muerte de
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Apolonio hasta que se dió á luz el romance de Filos un rey infiel aun en materia de religion, ¿
consi
trales; que esos milagros imaginarios no ¿ renegar de Jesucristo por sus palabras, cuan
ninguna resolucion ni efecto, por cuyo medio pudiera o el soberano lo mande, con tal que conserve en su
comprobarse su realidad, que la mayor parte eran corazon la fe de Jesucristo. En este caso, dice, no es
ridículos, indignos de Dios, sin la menor utilidad pa el súbdito el que reniega de Jesucristo delante de los
ra los hombres y no conducian mas que á hacer con hombres, es el rey y el gobierno. Por consiguiente
siderar á su autor como á un mágico. Laclancio opuso no aprueba la constancia de los mártires. Para pro
una parte de estas reflexiones á Hiérocles. Divin. bar esta detestable doctrina, pregunta lo que deberia
Instit. l. 5, c. 3. hacer un mahometano al cual se le mandara bajo
Asi, á pesar de todos los esfuerzos de los filósofos, pena de la vida el abjurar el mahometismo y profe—
el nombre de Apolonio y sus pretendidos prodigios sar el cristianismo contra su conciencia. Si se sostie
yacen en el olvido, al paso que Jesucristo ha sido ne, dice, que debe mas bien sufrir la muerte, se
reconocido como Hijo de Dios y Salvador de los hom autoriza átodo súbdito para resistir á su soberano res
bres en la mayor parte del universo. Tillemont. Vies pecto á la religion, sea verdadera ó falsa. Leviathan,
º,º t. 2, p. 120; Brucker, Hist. philosophique c. 2, p. 334.
..2, p. 98. A esto respondemos que este mahometano debe
Mosheim en sus Notas sobre Cudworth c , S. 15, empezar por dejarse instruir, á fin de deponer su fal—
no aprueba la opinion de los que han creido que Apo sa conciencia; que si le fuera imposible disipar su ce
lonio obró realmente prodigios por medio ¿ la in guedad, suposicion que no admitimos; estaria obli
tervencion del demonio; no puede persuadirse que gado á sufrir la muerte. Dios mandó á los israelitas
Dios haya permitido al enemigo de la salvacion , el esterminará los idólatras, pero no les ordeno el ar
egercer sobre la tierra un poder sobrenatural para rastrarlos á los pies de los altares, para hacerles prac
engañará los hombres, al mismo tiempo que Jesu licar el bajo pena de la vida. Jesucristo nun
cristo y los apóstoles egercian un poder divino para ca mandó emplear la violencia y los suplicios para
destruir el imperio del demonio. Cree, pues, que los obligar á los paganos á profesar su doctrina contra su
pretendidos milagros de Apolonio no son mas que conciencia. Por lo demas es un sofisma el comparar
curaciones naturales obradas con el arle médico que la conciencia ilustrada y recla de un cristiano con la
este filósofo habia estudiado, pero que les parecian errónea y falsa de un pagano ó de un mohometano.
milagrosas á los orientales, siempre prontos á esta Es un absurdo el querer que la autoridad del sobera
siarse con el mérito de los médicos, y con las cuales no sea superior ¿? ley divina dada terminantemente
este hábil embaucador tuvo cuidado de mezclar al— por Jesucristo. «Si alguuo me niega delante de los
guna parte de charlatanismo, á fin de que sus curas » hombres, yo le negaré delante de mi Padre». Mathei,
fueran mas maravillosas. c. 10, y 33. La ley del soberano no puede tener fuer
Mosheim añade que este filósofo no fue mas que za sino en tanto que Dios nos ordena el estar sumisos:
el remedo de Pitágoras, cuya celebridad ambiciona ahora bien, Dios no ha dado á ningun soberano la
ha; que si se comparan la historia de Apolonio por autoridad de hacer leyes contrarias á la suya. Jesu
Filostrates, con la que Luciano ha hecho del falso cristo nos dice que demos al César lo que es del César,
Alejandro, se encontrará entre estos dos impostores y á Dios lo que es de de Dios, c. 22, y.21: á Dios per
una semejanza perfecta. Estas reflexiones nos pare ienece y no al Cesar , el prescribirnos la religion. Si
cen muy juiciosas. el soberano nos mandara cometer un perjurio, un ro
bo, un adulterio, un homicidio, ó cualquier otro cri
Apostasía, Apóstata. Dejando á los canonis men contrario á la ley natural, estaríamos obligados
tas los diversos sentidos de esta palabra que pueden á obedecerle?
pertenecerles, nosotros entendemos por apostasia Algunos antiguos apóstatas para escusar su crimen
el crimen del que abandona la verdadera religion pa negaron la divinidad de Jesucristo; decian que rene
ra abrazar otra falsa. gaban no de un Dios, sino de un hombre. V. Elces AITAs
Ya en tiempo de los apóstoles hubo apóstatas del Entre los católicos se llama tambien apóstata un
cristianismo; S. Juan nos habla de ellos y los llamahombre que, sin dispensa legítima, renuncia á el
antecristos. I. Joan. c: 2, y. 8. Se aumen ló su nú hábito y al estado religioso en el cual habia hecho
mero cuando las persecuciones fueron crueles; Plinio profesion.
se informó de muchos y declara en su carta á Traja
no, que nada descubrió por su confesion, sino que el Apostol, enviado del griego Apo y sTELlo yo en
cristianismo es un esceso de supersticion. Efectiva vio. Se designaban bajo este nombre los doce discípu
mente, ninguno de los tránsfugas reveló jamás á los los que Jesucristo eligió y envió por sí mismo á predi
judios ni á los paganos un solo hecho desventajoso car su Evangelio y propagarle por todas las naciones.
para la religion que abandonó ; mas bien hacian su Algunos falsos predicadores trataron de poner en
apologia. Cuando cesaron las persecuciones, hicieron duda la cualidad de apostol de S. Pablo, pretestando
muchos penitencia, y obtuvieron el perdon. Es una que no habia sido instruido ni enviado por Jesucristo.
prueba invencible de la verdad v santidad del cristia S. Pablo rechazó con fuerza esta injuria al principio
nismo , á la que no han prestado mucha atencion sus de su epístola á los Galatas. En efecto, su eleccion y
acusadores. mision se encuentran perfectamente demostradas en
lobbes, que queria que la autoridad de los sobe esta palabra que Dios dice á Ananias, hablando de
ranos fuera superior á la de Dios, dice que un cristia Saulo convertido. Act. c. 9, y . 16: Este hombre es
no está obligado en conciencia á obedecer las leyes de un instrumento que he elegido para llevar mi nombrº
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delante de los reyes y de las naciones.» Dios queria con la Escritura santa y con razones sólidas que la
dará entender con esto que es dueño de encomendar facultades de los apóstoles se trasmiten por medio de
una mision estraordinaria á quien le plazca; que la ordenacion á los pastores de la Iglesia, y respon
aun cuando los apóstoles elegidos por Jesucristo no deremos á las calumnias de los enemigos del clere.
existiesen, no por esto la mision habia concluido y Respecto de la enseñanza, es muy esencial el notar
desaparecido. que los apóstoles fueron simples testigos de lo que Je
Pero á esta mision divina S. Pablo reunia la mision sucristo habia hecho y enseñado: «Vosotros me servi
ordinaria que trae su origen de los pastores de la reis de testigos. Act. c. 1, y.8. Ellos mismos se tie
Iglesia, por medio de la oracion é imposicion de las nen por tales: «Nosotros no podernos dispensarnos de
manos, de los profetas y doctores de la Iglesia de An publicar lo que hemos visto y oido.» Act. c., y. 20.
tioquía. Act. c. 13, y: 2 y 3. Ejemplo que no se ha «Os anunciamos, y os atestiguamos, lo que hemos
imitado por los que en los siglos posteriores han pre visto y oido.» I Joan c. 1, y . 1 y 2. «Yo he recibido
tendido ser enviados de Dios para reformar la Iglesia. del Señor, dice S. Pablo, lo que os he enseñado I Cor.
El ministerio de los apóstoles consistia: 1.º En en c. 11, y: 23. Seria imposible que doce apóstoles y una
señar á todas las naciones: Predicad el Evangelio á multitud de discípulos dispersos hubiesen enseñado
toda criatura; lo que os digo al oido publicadlo sobre una misma doctrina, establecido una misma fé, si to
los techos, etc. La funcion de enseñar con autoridad dos no hubieran sido fieles para predicar lo que habian
lleva consigo la de juzgar y decidir cuál era la doc visto y aprendido de Jesucristo. La uniformidad de
trina conforme ó contraria á la de Jesucristo, la de doctrina atestigua evidentemente la unidad de origen.
aprobar la ¿ y condenar la segunda; los após En segundo lugar, aunque hubiesen tenido el don
toles asi lo hicieron, como vemos por sus cartas. 2." de los milagros les hubiera sido imposible hacer un
En gobernar el rebaño de Jesucristo en calidad de ¿ número de prosélitos y fundar iglesias, si los
pastores. Este divino Salvador no encomendó esta echos que publicaban no hubiesen sido incontesta
funcion solo á S. Pedro cuando le dijo: Apacentad bles y llevados al mas alto grado de notoriedad. En
mis corderos, apacentad mis ovejas, porque este mis— vano podria hacer milagros un taumaturgo, para
mo apóstol dice á los ancianos de la Iglesia ó á los sa persuadirnos hechos cuya falsedad nos fuera conoci
cerdotes: «Apacentad el rebaño de Dios que está á da con toda claridad, sobre todo, hechos cuyas conse
vuestro alrededor, no dominando á la herencia del cuencias debían influir sobre toda nuestra vida; á me .
Señor sino sirviéndola de modelo con todo vuestro co nos que la notoriedad no viniera en apoyo de su tes
razon: y cuando se presente el ¿ de los pas— timonio, no nos convertiria un milagro.
tores, recibireis una corona de gloria incorruptible.» Los hechos que los apóstoles publicaron en el mis
I Petr. c. 5, y . 2. El cuidado del pastor no se limita mo sitio en que pasaron, y en donde se encontraban
águiar las ovejas; consiste lambien en alimentarlas, los testigos oculares, son los milagros de Jesucristo
curarlas cuando estén enfermas, y volverlas al redil y principalmente su resurreccion. No se podia ser
cuando se estravien: por consiguiente Jesucristo en cristiano sin creer estos hechos esenciales: los hechos
cargaba á los apóstoles el bautizar; les daba poder de fueron los que persuadieron la doctrina, y no la doc
absolver y retener los ¿ de consagrar su cuer trina la que hizo que se creyera en los hechos. ¿Cómo
¿ y sangre, de dar el Espíritu Santo, etc. «Que el habrian podido los apóstoles convertir un solo judio
mbre nos mire, dice S. Pablo, como los ministros en Jerusalen, si los milagros y la resurreccion de Je—
de Jesucristo y los dispensadores de los misterios de sucristo hubieran sido contradichos por la notoriedad
Dios.» I Cor. c., y. 1. Dice a los ancianos de la pública? º -

lglesia de Efeso que el Espíritu Santo los ha estable No se disputa á los apóstoles la cualidad de envia
cido obispos ó vigilantes para gobernar la Iglesia de dos de Jesucristo; pero se trata de probar á los incré
Dios. Act. c. 20, y. 28.3." En egercer la autoridad dulos que esta mision era divina : que los apóstoles
de jueces y de legisladores: «En el tiempo de la re hicieron milagros para demostrarla, que por otra par
generacion, les dice Jesucristo, ó de la renovacion de te fueron acompañados de todos los signos suficientes
todas las cosas, cuando el Hijo del hombre esté colo— para caracterizar á los enviados de Dios.
cado sobre el trono de su magestad, vosotros mismos 1.º La historia llamada Actas de los apóstoles, en
estareis sentados sobre doce sillas para juzgar las tri la cual se refieren sus milagros, anduvo entre las ma
bus de lsrael.» Mat. c. 19, y .28. Les declara que to nos de los fieles, en una época en que se podia saber
do aquello que hayan atado ó desatado sobre la tierra, de los testigos oculares si estos milagros eran reales ó
será atado y desatado en el cielo, c. 18, y 18. Tam maginarios. El cojo curado á la vista del pueblo y á
bien en el concilio de Jerusalen, dieron como ley á los la puerta del Templo, la resurreccion de Tabito, los
fieles el abstenerse de la sangre y de las carnes sofo dones del Espíritu Santo comunicados por la impo
cadas, etc. Act. c. 15, y. 28. S. Pablo juzga á un in sicion de las manos de los apóstoles, la eficacia de la
º digno de ser entregado á s¿ Cor. c. 5, sombra de S. Pedro, etc., no son prodigios en los cua
-3, etc. les haya podido influir la ilusion; la mayor parte fue
¿En qué se habrán fundado algunos protestantes ron obrados á presencia de testigos interesados en
preceptores de nuestros incrédulos, para enseñarles desmentirlos. Si no fueron reales, y sí imposturas, era
que los apóstoles no recibieron de Dios mas autoridad imposible que los judios y paganos hubieran dado su
que la de enseñar; que los demas privilegios de que asentimiento y se convirtieran; los apóstoles fundaron
se ha apoderado el clero son otras tantas usurpacio Iglesias en Jerusalen, en Antioquía, en Roma y en las
nes y alaques injustos á la libertad de los fieles ? En principales ciudades de la Grecia, compuestas en par
las palabras Obispo, PastoR, Sucesion, probaremos ie de judios que pudieron hallarse en Jerusalen duran
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te las fiestas de Pascuas ó de Pentecostes en el mismo veinte años, y el de otros muchos parientes de Je
año de la muerte del Salvador. sucristo está atestiguado por Hegesipo, autor casi
2.º S. Pablo escribiendo á estas diferentes lgle— contemporáneo. Eusebio Hist. ecles... . 3, c. 32. San
sias, atribuye sus sucesos á los milagros que hacia. Clemente de Roma, testigo ocular, despues de haber
Rom. c. 15, y. 18 y 19; 1." Cor. c. 2, y ... Ofré— hablado del martirio de S. Pedro y S. Pablo, dice
celos como prueba de su apostolado. II Corinth c. 12, que fueron seguidos por una multitud de elegidos que
12; Eph. c. 1, y, 19, etc. Si aquellos á quienes arrostraron como ellos los ultrages y los tormentos.
abla no hubiesen sido lestigos de estos milagros; ha Epist. 1" n.° 6. S. Policarpo dice que S. Pablo y
brian sufrido con paciencia los reproches y reprimen los demas apóstoles están todos en el Señor, con el
das que les daba? cual padecieron : cum , quo et passi sunt, Epist. ad
3.° En el Talmud de Jerusalen, que es el mas Philipp. S. Clemente de Alejandria dice tambien que
antiguo, los judios convienen en que se hacian mila los apóstoles murieron como Jesucristo por las Iglesias
gros á nombre de Jesucristo. Véase á Galatino, l. 8, que habian fundado. Strom. l. 4, c. 9. Este ¿
c. 5. Era preciso que este hecho estuviese bien ave maestro se lo habia predicho. Luc. c. 21, y. 16. Se
riguado para arrancar semejante confesion por parte cumplió su palabra. No tenemos pues necesidad de
de los judios. documentos aprócrifos para probar el martirio de los
..º Celso y Juliano tratan de mágicos á los dis— apóstoles.
cípulos de Jesucristo. Esto prueba por lo menos que Mosheim que lo pone en duda, Hist. críst. seccion. 1.º
estos discípulos obraban milagros y que era una opi S. 16, le opone un pasage de Heracleon, herege del
nion constante. Pero los mágicos jamás hicieron mi segundo siglo, que dice que Mateo, Felipe, To—
lagros para sacar á los hombres del error y del vicio, mas, Leví y otros muchos, no murieron por confesar
para enseñar la verdad y la virtud. Esta es la res— áJesucristo. Clemente de Alejandria que refuta este
puesta de nuestros apologistas. pasage no se ha atrevido á afirmar el hecho contrario.
5.º En el nacimiento de la Iglesia se presenta Strom l. , , c. 9, p. 595. Pero Mosheim trata de en—
ron mesías, doctores y apóstoles falsos: todos prome gañar. Heracleon, que sostenia la inutilidad del mar
tian milagros, y seducian al pueblo con sus presti tirio, estaba interesado en disputar el de los apóstoles;
gios, Jesucristo lo habia predicho , los apóstoles se asi su testimonio es sospechoso: tambien le refuta
quejaban de esto: las primeras heregías fueron la terminantemente Clemente de Alejandria, ibidem
obra de sus imposturas. Si los apóstoles no hubieran p. 597. «El Señor, dice, bebió solo el caliz para puri—
hecho milagros reales é incontestables para confun ficará los hombres, aun á los infieles que le tendian
dirlos, no ¿ tenido un suceso tan duradero, lazos; á su egemplo, los apóstoles padecieron por las
y no se hubiera hecho mas caso de ellos que de los ¿ que fundaron.». Mosheim no hace mencion
engañadores á quienes aquellos quitaron la máscara. el testimonio de S. Policarpo, que es decisivo: las
6.º Los incrédulos no reflexionan sobre la difi. palabras de los Padres posteriores que él alega no
cultad que habia para convertir á los judios, abrir son mas que pruebas negativas, que no pueden pre
los ojos de los paganos, reunir en una sociedad reli valecer sobre las aserciones positivas. A mediados
giosa dos especies de hombres que se delestaban, sub del siglo II, en cuyo tiempo vivia Heracleon, po—
yugar filósofos pertinaces, y cansar la crueldad de dia ignorarse todavia el martirio de muchos apósto—
los perseguidores. Que entren en sí mismos y digan les, que se habia verificado en paises lejanos, y del
si hubiera sido posible convertir á sus predecesores cual se tuvo noticia despues.
sin milagros. - Cuando los incrédulos quisieron raciocinar acerca
En vano han agotado toda su sagacidad para en de la conducta de los apóstoles, y sobre las cansas del
contrar en la conducia de los apóstoles señales de éxito de su predicacion se hallaron muy embaraza—
imposturas; la sinceridad, el candor, el desinterés, dos: se han visto obligados á atribuirles cualidades
la caridad, la paciencia, el valor de los enviados de incompatibles, que nunca pudieron encontrarse reu
Jesucristo brillaron en todas sus acciones; eran un nidas en la naturaleza humana. Les atribuyeron una
traslado del cuadro de las virtudes de su maestro; sin ignorancia escesiva y artificios impenetrables, una
este carácter decisivo de mision divina, no hubieran roseria sin igual , y un proyecto de política profun
inspirado á los fieles tanta veneracion. Se han visto a, una credulidad estúpida y una prudencia consu—
muchos filósofos erigirse en reformadores de los vi mada, un interés sórdido y un valor heróico, un fana
cios y de los errores de la humanidad; pero ningu tismo repugnante y un celo ardiente por la gloria de
no ha manifestado las virtudes, la sabiduria, la cari Jesucristo, una maldad obstinada y el deseo de san
dad, el valor, la santidad de los apóstoles, tificar el mundo, una ambicion ciega y la sed del
No está probado, dicen, que hayan sufrido el mar martirio.
tirio para confirmar sus predicaciones: no se cono Estas acusaciones contradictorias bastan sin duda
ce su género de muerte sino por actas supuestas, y alguna para hacer la apologia de los apóstoles; pero
por leyendas ridículas y apócrifas. si se las examina en ¿ se vé todavia mejor lo
Nosotros sostenemos que el martirio de la mayor absurdo de ellas.
parte de los apóstoles esiá muy bien probado. E de Aun cuando los apóstoles hubieran sido tan estúpi
S. Pedro y S. Pablo está atestiguado por sus discípu dos para dejarse engañar por los milagros; por las
los y por su tumba; el de Santiago el Mayor y el de apariencias de virtud y por las promesas de Jesucris
S. Esteban se refiere en las Actas de los apóstoles; to, su error debió cesar despues de la muerte de su
el de Santiago el Menor lo trae Josefo, Antiq. Jud. maestro. Si no hubiese resucitado, segun lo prometió,
l. 20, c. 8; el de S. Simeon, de edad de ciento y era imposible que sus apóstoles y todos sus discípulos
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no se convencieran de que habian sido engañados. S. Pablo y S. Juan se quejan de ello en sus cartas:
Qué causa les hubiera movido en este caso para ar— hubo judios pertinaces, que apesar de su fé en Jesu
rostrar los trabajos, los tormentos y la muerte para cristo, querian que se continuaran observando los ri
establecer el Evangelio y para referirlo todo á la glo tos mosáicos; hubo tambien apóstatas, lo vemos por
ria de un maestro que se habia burlado de su credu las cartas de S. Juan; pronto salieron filósofos que
lidad? Semejante proyecto choca de frente con todos combatieron los unos la divinidad de Jesucristo, otros
los sentimientos de la humanidad. la realidad de su carne, muchos su nacimiento milagro
POT 0tra ¿ no habria llegado á ¿? si este so, etc. En medio de estas disputas, celos é intereses
proyecto le hubieran formado en el espacio de los cua diversos, ¿cómo no hubo un solo hombre que tuviese
renta dias que pasaron despues de la muerte del Sal— la buena fé ó la malicia de manifestar la falsedad de
vador, pues que habia necesidad de suponer que los alguno de los hechos publicados por los apostoles,
apóstoles habian ocultado su cuerpo en el sepulcro, principalmente del hecho mas esencial de todos, de la
para poder publicar su resurreccion. Cómo era de es— resurreccion de Jesucristo?
perar que un complot, en el que era indispensable Ellos mismos confiesan en sus escritos, que hicie—
que entraran muchas personas, no se hubiera descu ron milagros, que por los mismos confirmaron su
bierto por alguno de los cómplices? Los hombres sen doctrina y no con raciocinios, 1." Cor. c. 2, y., etc.
cillos y groseros, tales como los apóstoles, son comun Si esto no es verdad, nunca se podrá concebir cómo
mente tímidos y poco susceptibles de ambicion: si hu pudieron encontrar un solo oyente bastante ciego pa
bieran estado dominados por el interés, habrian ga ra adherirse á ellos.
nado mas en descubrir á los judios la impostura de En una palabra, la conducta de los apostoles, sus
sus cólegas, que obstinándose en sostenerla á costa de lecciones, sus sucesos, su perseverancia en el apos—
su vida. tolado hasta la muerte, la duracion del edificio que
Por último, qué interés pudo inducir á doce apos - fundaron, apesar de las tempestades con que ha sido
toles gara permanecer adictos á su maestro despues combatido en el espacio de diez y ocho siglos, son
de su muerte, si no hubiera resucitado? Desde este otras tantas pruebas demostrativas de la verdad y
momento debieron perder las esperanzas que sus pro divinidad del cristianismo.
mesas les habian hecho concebir, no esperar nada mas Comunmente se da el nombre de apostol al prime—
que de sí mismos, ni trabajar nada sinó para sí; por ro que ha llevado la é á algun pais: asi S. Dionisio,
el contrario, persisten en sacrificarse por él; empren— primer obispo de Paris, es el apostol de Francia; San
den el darle á conocer, por toda la tierra por el Hijo Bonifacio de Alemania; el monge S. Agustin el de
de Dios, de hacer que le rindan homenage todos los Inglaterra; S. Francisco Javier el de las Indias.
homhres. Aun cuando esto les hubiera podido ser util La muerte trágica de los apostoles parecia la mas
en la Judea, en donde los milagros de Jesucristo le propia para arredrar á los intentaran imitarlos;
habian hecho célebre, de nada les serviria en los pai pera antes por el contrario, ha sido un nuevo atrac
ses lejanos, en donde no habrian oido hablar de él. tivo para empeñar á millares de hombres á entregar
¿Se les ha visto que hicieran fortuna en alguna, par— se á los trabajos del apostolado. He aqui, segun la
te, formarse un rebaño para su utilidad, atribuirse opinion de los incrédulos, una nueva especie de fana
la gloria de sus sucesos, y gozar tranquilamente de tismo de la cual nunca hubo ejemplo en el mundo.
los respetos, confianza y liberalidad de los fieles? San Hubo un tiempo en que el Papa se llamaba espe
Juan es el único que en su vejez se fijó en una silla cialmente ¿?, á causa de su preeminencia en ca—
particular; todos los demas murieron en los trabajos, lidad de sucesor de S. Pedro. Véase Sidonio Apoli
en los viajes y en los peligros del apostolado; todos nar, lib. 6, Ep. .
pudieron decir como S. Pablo: «Si no esperamos nada
mas que en este mundo, somos los mas desgraciados APOSTOL, era tambien en el origen de la Iglesia,
de todos los hombres». 1.º Cor. c. 15, y. 19. el título que se daba á sus enviados, los que viaja
Por otra parte si los apóstoles fueron unos imposto ban por sus intereses. Asi S. Pablo dice en su epís
res, lejos de tomar ninguna de las precauciones pro tola á los romanos c. 16, y. 7: «saludad á Andrónico
pias para ocultar su impostura, eligieron las mas á y Junia mis ¿ y compañeros de mi cautiverio,
propósito para descubrirlas; unos hombres interesados que se han distinguido entre los apostoles». Tambien
en engañar, hubieran supuesto personages menos co era el título que se daba á los eran enviados por
nocidos, hechos menos palpables, prodigios menos algunas iglesias, para recojer las colectas y limosnas
recientes y un teatro menos público. de los fieles destinadas para subvenir á las necesida
Han aparecido en el mundo un gran número de des de los pobres y del clero de otras igle
impostores, pero no se condujeron como los apostoles; sias. Esta es la razon porque S. Pablo, escribiendo á
ninguno ha demostrado tanto candor, desinterés, ni los filipenses, les dice que Eparodito, su apostol, ha
celo, ni nos ha enseñado una virtud tan bella y atrac bia socorrido sus necesidades. c. 2, y. 25. Los cris
tiva, ni ha deseado derramar su sangre para confir tianos tomaron esta costumbre de las sinagogas, que
mar la verdad de su doctrina, ni ha atribuido á Dios daban este nombre á los que encargaba una mision
toda la gloria de sus sucesos. semejante, y el de apostolado al oficio caritativo que
Prescindiendo del interés que tenian los judios en ejercian. Pero los apostoles ó enviados de la sinagoga
descubrir la impostura de los apostoles, si hubieran nada tienen de comun con los de Jesucristo.
engañado en un solo hecho, los hubieran desenmas—
carado otros enemigos. Bien pronto aparecieron fal APOSTOL, en la liturgia griega, apóstolos, es
sos apostoles que alteraban la doctrina de Jesucristo; un término usado para designar un libro que contie
TOMIO I. 24
 APO 142 APO
ne ¿ las epístolas de S. Pablo, segun el Apostólico, significa en general lo que provie
ordenó el curso del año; porque asi como tienen un ne de los apóstoles. En la Iglesia cristiana se cree
libro llamado EvANGELvoN, que contiene los Evange que la doctrina para ser verdadera, debe ser aposto—
lios, tienen tambien otro Apóstolos, y lo mas proba lica, que no debe enseñarse mas que lo que nos ha sido
ble es que al principio no contenia mas que las epís transmitido por los apóstoles ó de viva voz, ó por es
tolas de S. Pablo; pero desde hace mucho tiempo con crito: siendo la doctrina cristiana una doctrina reve
tiene tambien las Actas de los apostoles, las epístolas lada, no podemos recibirla con certeza sino por el
canónicas y el Apocalipsis; esta es la razon, por qué órgano de los que Jesucristo envió para enseñarla.
se llama tambien PRAsApóstolos, á eausa de las actas Tertuliano estableció con mucha fuerza este principio
ue contiene, y que los griegos denominan PRAsEys. en sus prescripciones contra los hereges.
l nombre apostolus ha estado en uso en la Iglesia la Por la misma razon la mision de los pastores para ser
tina en el mismo sentido, como nos lo enseñan San legítima debe venir de los apóstoles por una sucesion no
Gregorio el grande, Hincmaro é Isidoro de Sevilla, interrumpida. Toda mision que no provengadeellos no
es lo que llaman en el dia epistolario. viene de Jesucristo, ni dá ninguna autoridad ni poder.
GSS" En la mision apostólica es necesario no * Asi la apostolicidad de la doctrina y del mi
confundir los dones estraordinarios y facultades per nisterio forman dos partes integrantes de la apos
sonales que recibieron los apóstoles, con las comunes tolicidad de la Iglesia y son igualmente esenciales para
y ordinarias concedidas á sus sucesores. Entre los la verdadera sociedad de los fieles, porque por el
primeros se cuenta el don de milagros, la infalibili ministerio es como la doctrina se asegura y espar—
dad personal, y la santidad de cada uno de los após— ce. En el ministerio eclesiástico se distingue el poder
toles; y estos dones no se transmiten necesariamente de orden y el poder de jurisdiccion. El primero se ha
á los sucesores en el apostolado. Acerca de la infali perpetuado sin interrupcion por medio de la ordena
bilidad y santidad, asi como sobre la promesa hecha cion canónica; los apóstoles ordenaron á los primeros
por Jesucristo á los apóstoles y á sus sucesores, yo soy obispos; estos á su vez han consagrado otros, de ma—
con vosotros, véase la segunda instruccion pastoral de nera que los obispos actuales han recibido el mismo
Bossuet, relativa á las promesas de la Iglesia. caracter episcopal que los sucesores de los apóstoles.
Los obispos, como los apóstoles, han recibido la mi El poder de jurisdiccion, siendo anejo á las sillas, y cir
sion divina de enseñar, dando testimonio de lo que cunscripto á los territorios desde el origen de la Igle
siempre se creyó en la Iglesia, de cuyas doctrinas son sia, cada sucesor ha recibido la jurisdicion que tenia
guardianes y depositarios: pertenéceles ¿ si tal su predecesor, y esta tradicion no interrumpida se
ó tal doctrina, es conforme ó contraria á las enseñan— remonta hasta losapóstoles. Siendolas nuevas ereccio
zas que ellos han recibido con la obligacion de perpe nes de obispados, ramas que salen del tronco sagrado,
tuarlas: atáñeles igualmente censurar los errores cón verificadas por los sucesores de los apóstoles, se en
trarios ála fé: tambien el ordenará los sacerdotes, etc. cuentran tambien en las sucesion apostólica. En vir
estan, sin embargo, sujetos á la jurisdiccion universal tud de la ordenacion, los obispos dirigen al cielo los
del romano Pontífice. Los que en nuestros dias quieren votos de los pueblos, ofrecen el santo sacrificio y ad
arrogarse la autoridad de obispado, ya regulando la ministran los sacramentos; en virtud de la mision y
enseñanza de las universidades, seminarios y colegios, de la jurisdiccion anuncian las verdades santas, juz
ya estorbando, impidiendo, ó calificando de abuso las gan las materias de fé, y enseñan á los pueblos cris
reclamaciones de los centinelas de Israél, comelen un tianos lo que deben creer; por donde se vé que la su
error palpable, y una usurpacion que nada bastaria á cesion de jurisdiccion, y no la de ordenacion, es la que
justificar. Las leyes civiles y reglamentos universita. ¿ a doctrina. La sucesion de los obisposes tam
rios jamás alcanzarán al sagrado derecho de inspec íen considerada por los Padres de la Iglesia como el
cion que tienen los obispos sobre las doctrinas. Y des rincipal fundamento de la tradicion apostólica. San
graciado el pais en que asi la enseñanza como la Igle reneo (contra ha res. l. 3, c. 3; l. , c. 20, 26, y 33)
sia se secularicen, y hagan ministeriales! Jamas se in dice: «El conocimiento de la doctrina apostólica, de
vaden estos sagrados sin que se resientan hondamente la antigüedad de la Iglesia, del caracter del cuerpo de
las creencias, y se estremezca en sus fundamentos la Jesucristo, está en la sucesion de los obispos áquie
sociedad. Cuando se corta ó profana la mision de los nes los apóstoles la han transmitido en cada pais, y ha
ministros del Altísimo, entonces hay cisma, hay se llegado sin alteracion hasta nosotros.;... En donde es
cularizacion en la Iglesia, humanízase el ministerio, tén las gracias del Señor, alli es en donde es preciso
deja por consiguiente de ser apostólico y divino. Cuan aprender la verdad; es decir, al lado de aquellos en
do á pretesto de mal entendidas é imponentes re quienes reside la sucesion eclesiástica, y con ella la pa
formas se quita la inspeccion sobre las doctrinas á los labra sana, irreprensible é incorruptible..... Por este
¿ de la Iglesia, entonces el magisterio es todo orden y sucesion, la tradicion que ecsiste en la Igle
umano; y cortada la mision que Jesucristo dió á sus sia desde los apóstoles, y la preconizacion de la ver
apóstoles: id, enseñad, quedan la fé y la doctrina á dad llega hasta nosotros, y esta es la señal fija de que
merced de mil contrarios vientos, y espuestas al fu tenemos la misma fé vivificadora que se ha conser—
ror de la heregía y de la incredulidad. vado y ha sido verdaderamente iransmitida en las
iglesias hasta el presente. Es necesario escuchará
Apóstoles (falsos). Fueron algunosjudios que aquellos obisposqueestan en la Iglesia y que tienen como
queriendo restringir la misericordia de Dios y destruir lo hemos demostrado, la sucesion desde los apóstoles:
lāsalvacionque Jesucristo vinoáanunciarátodas lasna y que con esta sucesion de episcopado, recibieron
ciones, sostenia que no habia muertosino por los judios. ciertamente, segun la voluntad divina, la gracia de la
 APO 13 AFO
verdad. Por lo que respecta á los demas que se sepa— les ú hombres apostólicos que vivieron con ellos. Por
ran de la sucesion principal y la aglomeran en cual— que de esta suerte establecen su filiacion las Iglesias
quier lugar que sea, se les debe tener como sospe apostólicas. Asi por ejemplo la lglesia de Smirna re
chosos ó como herejes y de doctrina depravada; ó fiere que Policarpo fue colocado en ella por S. Juan.
como cismáticos llenos de orgullo y compiacencia para La de ltoma produce á Clemente ordenado por S. Pe
consigo mismos; ó como hipócritas que obran con la dro. Y asi sucesivamente todas las Iglesias manifies—
mira del interés y dela vanagloria. Todos estos pues se tan á los que, establecidos por los apóstoles en el epis
separan de la verdad.;... La tradicion de los apósto— copado, les transmitieron la semilla apostólica. Que
les manifestada en todo el mundo, es facil de cono inventen los herejes, una cosa parecida á esto... Los
cer en todas las Iglesias por quien desee ver la ver que quereis, acerca del negocio de vuestra salvacion,
dad ; y nosotros podemos asegurar de aquellos que satisfacer una curiosidad lejítima, recorred las igle
fueron instituidos por los apóstoles obispos en las igle— . sias apostólicas en las cuales residen todavia las cá
sias y sus sucesores hasta nosotros, que no han cono— tedras de los apóstoles en los sitios que ocuparon, en
cido ni enseñado nada de lo que los herejes adelan— las que se recitan todavia sus cartas auténticas que re
tan en su delirio. Mas, como seria muy largo el re cuerdan sus voces y representan sus personas. Estais
ferir en esta obra todas las sucesiones de las diferen prócsimos á la Acaya? teneis á Corinto. Si no estais
tes Iglesias, tomemos por, tipo esa grande, antigua, muy desviados de la Macedonia, teneis á Filipos y á
y nombrada Iglesia fundada en Roma los glorio— Tesalónica. Si vais al Asia, allí teneis á Efeso. Si es—
sos apóstoles S. Pedro y S. Pablo. Al demostrar la tais prócsimos á Italia, teneis á Roma cuya autori—
tradicion que conserva de los apóstoles y la fé anun— dad está cerca de nosotros.... Se puede decir con mu
ciada á todos los hombres, y que ha llegado hasta cha razon á los herejes: Quién sois? Cuándo y de
nosotros por la sucesion de los obispos, confundimos dónde habeis venido? Qué haceis en beneficio mio,
á todos aquellos, que de cualquiera manera que sea, sino me perteneis? Con qué derecho, Marcion, talas mi
ó por una complacencia culpable para consigo mis bosque? Quién te ha permitido, Valentin, enturbiar
mos ó por una vanagloria, ó por una ceguedad y opi mi manantial? Con qué autoridad, Apeles, traspasas
nion corrompidas la reunen ó agrupan en donde no mis límites? Mia es la posesion: poseo desde muy an
deben». S. Ireneo consigna despues la sucesion de los tiguo, poseo el primero. Traigo mi origen indudable
obispos de Roma desde S. Pedro hasta el papa Eleu— de los fundadoresá quien pertenece la posesion. Soy
terio su contemporáneo; y nosotros podíamos conti el heredero de los apóstoles».
nuar esta cadena hasta Gregorio XVI. Este desafio dirijido por Tertuliano á los hereges
Tertuliano (Tratado de las prescripciones; c. 20, 21, de su tiempo le podemos repetir en el dia á las comu
32, 36) se espresa de esta suerte: «Los apóstoles niones protestantes.
fundaron Iglesias en todas las ciudades. De estas sa Clemente de Alejandria, dice Stromat.), que los que
caron las demas la comunicacion de la fé y las semi conservaban la verdadera tradicion de la sana doctri
llas de la doctrina, sucediendo lo mismo todos los dias na recibida de los apóstoles, como un hijo la recibiria
si han de ser Iglesias. Por esto se repulan como cató de su padre; por la voluntad de Dios ha llegado has
licas, porque descienden de las Iglesias apostólicas; ta su época para sembrar en ella las semillas apostó
toda raza participa de la naturaleza de su origen...... licas recibidas de los antiguos. No se puede indicar
Lo que predicaron los apóstoles, lo que Jesucriste les de un modo mas claro la sucesion apostólica.
había revelado, establezco esta prescripcion á saber; La sucesion en las Iglesias ha sido tambien dada
que no es necesario probarlo de otro modo que por para la nota de la vana, doctrina, por Orígenes, que
estas mismas Iglesias que los apóstoles fundaron pre refutando de antemano la pretensión de los protestán
dicando en ellas al principio de viva voz y despues tes, que quieren que las sagradas Escrituras hayan
sido ¿ para ellos, decia de los herejes de su
por escrito. Si esto es asi, es constante que toda doc
trina que está en armonia con estas lglesias, madres y tiempo (in Mat. tract. XXXIX): «Nosotros no debe
manantiales de la fé, debe ser considerada como la mos creerlos y alejarnos de ¿ tradicion de
verdad, pues que contiene sin duda alguna lo que la Iglesia, por el contrario no debemos creer mas que
la Iglesia recibio de los apóstoles, los apóstoles de Je lo que las Iglesias de Dios nos han transmitido por
sucristo, y Jesucristo de Dios; cualquiera otra doctri sucesion».
na debe ser juzgada desde luego como engañosa y La falta de la sucesion episcopal como señal del cis
contraria á la verdad de las Iglesias, de los apostoles, ma, no resalta menos del contesto de las palabras de
de Cristo, de Dios. Queda pues por demostrar que S.Cipriano (Ep. LXXXVI ad Magn.) cuando declara
nuestra doctrina viene de la tradicion de los apóstoles, que Ñovaciano no es obispo, ni puede ser considerado
y que todas las demas son falsas. Nosotros comunica como tal, el que con desprecio de la tradicion evanjé
mos con las Iglesias apostólicas, en cuanto que nues lica y apostólica, no sucediendo ánadie, ha nacido de
tra doctrina no difiere en nada de la suya. He aqui el sí mismo..... ¿Acaso puede mirarse como pastor el
testimonio de la verdad.... Si algunas herejías se que, mientras ecsiste uno verdadero, que preside en
atreven á referirse al tiempo apostólico para pare la Iglesia, en virtud de una ordenacion divina y una
cer transmitidas por los apóstoles, pretendiendo que sucesion lejítima, no sucediendo á nadie à empezando
ecsistian en aquella época, los desafiamos á que nos por sí mismo, aparece como el enemigo de la paz del
¿ el origen de sus Iglesias, á que consignen el Señor y de la unidad divina?» -

La sucesion de los obispos como señal irrecusable

orden de sus obispos descendiendo por una sucesion
continuada, de manera que sus primeros obispos lu de la verdad, y por consiguiente como nota de la ver
viesen por autor ó por predecesor á uno de los apósto dadera Iglesia, está bien manifestada en el lenguaje
 APO 1) APO
de S. Epifanio; despues de haber referido la sucesion distintivos de la verdadera Iglesia, porque hace pro
de los papas, dice (Haeres. XXVII, c. 6) que «ningu fesion de estar adherida á la doctrina de los apóstoles;
no debe admirarse de que haya recorrido con lanto que sus pastores, por una sucesion constante, tienen
cuidado todos estos nombres, pues que por esto se de su mision de aquellos primeros enviados de Jesucris
muestra la verdad cierta y esacta». En otra parte(Ib. to. Ninguna de las sociedades que se llaman cristianas
LXXV, c. 6,) pregunta: «¿Cuáles son mas hábiles, el reune estos dos caracteres. Este titulo que se dá en el
hombre ¿? alucinado por el error, que se ha dia por escelencia á la Iglesia romana, no siempre le
presentado hace poco y que vive todavia, ólos testi ha gozado ella únicamente. En los primeros siglos del
gos que nos han precedido, y que antes que nosotros cristianismo, era comun á todas las iglesias que ha
han tenido en la Iglesia la misma tradicion que reci bian sido fundadas por los apóstoles, y con especia—
bieron de sus padres, que sus padres aprendieron de lidad las sillas de Roma, de Jerusalen, de Antioquia
sus antepasados, del mismo modo que la Iglesia con y de Alejandría, como aparece por los diferentes es—
serva hasta el dia con las tradiciones la fé verdadera critos de los Padres y otros monumentos de la historia
y pura que recibió de sus padres? eclesiástica. Las mismas iglesias que no podian decirse
El orijen de la cátedra, probada por la sucesion de apostolicas, con respeto á su fundacion hecha por otros
los obispos que la han ocupado, denota la santa Igle que no eran los apóstoles, no dejaban de tomar este
sia, segun S. Optato (De chism. Donat. l. V., c. 26;) nombre, ya á causa de la conformidad de su doctrina
pues que dice á los donatistas que no pueden ignorar con la de las iglesias apostolicas por su fundacion, ya
que S. Pedro fundó en Roma una cátedra episcopal en tambien porque todos los obispos se consideraban
la que se sentó el primero, y despues de haber referi como sucesores de los apóstoles, y obraban en sus
do la sucesion de los papas desde este apostol, les in diócesis con la autoridad de los mismos apóstoles.
vita á que digan el origen de la suya, una vez que Véase Obispos.
pretenden abrogarse el título de santa Iglesia. Por las fórmulas de Marculfo estendidas hácia el
Esta doctrina y la de S. Agustin que considera la año 660, parece que tambien se daba á los obispos
sucesion episcopal como esencial á la Iglesia, y como el nombre de apostólicos. El primer vestigio que se
una señal que distingue á la Iglesia verdadera de las encuentra de este uso, es una carta de Clodoveo á los
sectas privadas de esta sucesion. (Ep, CLXV, al L. IIl prelados reunidos en concilio en Orleans; empieza
ad Generos c. 1, n. 6 in Joan. tract, XXXIV. n. 6; De por estas palabras «El rey Clodoveo á los santos obis
util. credendi, c. XVII. n. 3; Contra Epist. fundam. pos y muy dignos de la silla apostolica». El rey Gon
c. 4, n. 5.) «Dudaremos, pregunta el gran doctor, el trano llama á los obispos reunidos en el concilio de
entrar en el seno de esta Iglesia que, apesar de los va Bolonia, los pontífices apostolicos.
nos ladridos de los herejes, ha obtenido por la su— En los siglos posteriores, habiendo caido en manos
cesion de sus obispos sobre la cátedra apostólica la de los sarracenos los tres patriarcados de Oriente, se
suprema majestad? IIaciendo la aplicacion de este reservó el título de apostolica á la sola silla de Ro
principio á la autenticidad de los libros santos dice ma, como el de Papa al soberano pontífice que es su
que el medio seguro de discernir los libros auténti obispo. S. Gregorio el Grande, que vivia en el siglo
cos de los apócrifos, consiste en ecsaminar cuáles son sesto, dice, lib. V, epist. 37, que aunque hubo mu
los que fueron trasmitidos ó no por los sucesores de chos apóstoles, no obstante la silla del príncipe de las
los obispos Contra adv. leg. et prophet. l. 1.º c. 20, apóstoles, tiene solo la suprema autoridad , y por
n. 36; (Contra Faustum l. 2, c. 5, 1.23. c. 9.). «Si los consiguiente el nombre de apostolica por un título
libros que llevan á su cabeza los nombres de An— particular. El abate Ruperto observa lib. 1.º de di
drés y Juan, fueran verdaderamente suyos, serian vin, offic. c. 27 que los sucesore de los demas apóstoles
recibidos por la Iglesia que desde su tiempo hasta el fueron llamados patriarcas; pero que el sucesor de
nuestro persevera en la sucesion cierta de los obis S. Pedro se denominó por escelencia apostólico en ra
s..... Se distingue de los libros mas recientes la es zon á la dignidad de príncipe de los apóstoles. Por
celente autoridad del antiguo y nuevo Testamento, la último el concilio de Reims celebrado en 109, de
cual confirmada desde la época de los apóstoles, está claró que el Soherano Pontífice de Roma era el único
colocada como sobre un trono elevado por las suce primado apostolico de la lglesia universal. De aqui
siones de los obispos y la propagacion de las iglesias, ¿ esas espresiones tan usadas en el dia de si
y á la cual debe someterse todo espíritu fiel y piadoso. la apostolica, nuncio apostolico, nolario apostolico,
Y advierto en pocas palabras á vosotros que estais breve apostolico, cámara apostolica, vicario apos
imbuidos en ese criminal y ecsecrable error, si que tolico, etc.
reis seguir la autoridad de las Escrituras, preferible á
todas las demas, seguid aquella que desde el tiempo Apostólicos (Padres). Véase PADREs DE LA
de la presencia de Jesucristo, conservada,, recomen IGLESIA.
dada y glorificada sobre toda la tierra, ha, llegado
hasta nosotros por la publicacion que hicieron los após. APOSTOLICOS. Nombre que tomaron dos sectas
toles de ella y por las sucesiones ciertas de los obispos». diferentes con el pretesto de que imitaban las cos
Nos contentamos con manifestar la doctrina de los tumbres y práctica de los apóstoles.
primeros siglos de la Iglesia, seria tan largo como Los primeros apostolicos, llamados tambien apolac
inútil el citar todos los santos doctores que han ense— titos, trajeron su origen de los encratitas ó los catá
ñado que la sucesion de los obispos es el principal fun ros en el siglo tercero; profesaban la abstinencia del
damento de la tradicion apostólica. matrimonio, del vino, de la carne, etc. Véase Apo—
El título de opostolica es pues uno de los caracteres TACT TOS.
 APO (13 A PO
La otra secta de los apostólicos hizo mucho ruido el que no fueron castigados por sus errores, sino por-.
siglo XIII; fué su fundador Gerardo Sagarelli & Se que alleraban la tranquilidad pública y el orden de
garel, natural de Parma. Ecsigia que sus discípulos, á la sociedad. Un error inocente, que no puede perju
imitacion de los apóstoles, fuesen de ciudad en ciudad dicar á nadie, sin duda es perdonable; pero una
vestidos de blanco, con una barba larga, los cabellos doctrina sediciosa que enardece los espíritus, cor
esparcidos y la cabeza, desnuda, acompañados de rompe las costumbres, alarma á los gobiernos, y es
ciertas mugeres que llamaban sus hermanas; Les seguida de una conmocion del pueblo, es un crímen
obligaba á renunciar á toda propiedad y á predicar de estado; hay un derecho para castigará sus auto
la penitencia; pero en sus reuniones particulares res y sectarios pertinaces.
anunciaban la destruccion prócsima de la Iglesia de No es de estrañar que los historiadores no hayan
Roma, el establecimiento de un culto mas puro y de referido de un modo uniforme los errores y la con
una Iglesia mas gloriosa. Esta Iglesia, segun él, era ducta de los apostolicos. En una secta de fanáticos
su secta, que denominaba la congregacion espiritual. ignorantes, no puede ser una misma la creencia; ca
Publicó que toda la autoridad que Jesucristo habia da uno tiene derecho para soñar y publicar sus vi
dado á S. Pedro y á sus sucesores, habia concluido, y siones: algunos pueden tener costumbres puras, al
que él la habia heredado; que asi, el Soberano Pontí paso que otros se entregan á los mayores desórdenes.
fice no tenia ninguna autoridad sobre él: añadia que Lo mismo ha sucedido en todos tiempos y en toda cla
las mugeres podian dejará sus maridos, y los mari se de seclarios.
dos á sus mugeres para entrar en su congregacion; Mosheim nos dice tambien que entre los menno—
que era el único medio de salvarse; que estando en nistas ó anabaptistas de Holanda, ecsiste una rama
todas partes Dios, no habia necesidad de Iglesia ni qué se denomina apostolicos, del nombre de Samuel
de servicio divino; que no era necesario hacer votos, Apostol, uno de sus pastores. Son unos mennonitas
y que la adhesion á su doctrina santificaba las accio rígidos, que no admiten en su comunion sino aque
nes mas criminales. Fácilmente se conoce los desór llos que hacen profesion de creer todos los puntos de
denes que podian resultarde esta doctrina fanática. Se doctrina contenidos en su confesion de fé pública: en
garel fné quemado vivo en Parma el año 1300. Por vez de que otra rama denominada de los galenistas
causa suya algunos autores han designado á los apos recibe todos aquellos que reconocen el orígen divi
tólicos con el nombre de segarelianos. no del antiguo y nuevo Testamento, cualesquiera que
Despues de su muerte otro fanático de Novara, lla sean por otra parte sus opiniones particulares. Histo
mado Dulcino ó Ducino, ocupó su lugar; se alababa de ria eccles. del siglo XVII, secc.2."2."part. c., S.7.
haber sido enviado del cielo para anunciar á los hom
bres el reinado de la caridad; se dice que se entre Apostolínos, religiosos cuya Orden tuvo ori
gaba á la impudicicia y que la permitia á sus sectarios; gen en el siglo catorce, en Milan (Italia).Tomaron
la moral predicada por Segarel debia necesariamen este nombre porque hacian profesion de imitar la vi
le producir este efecto. Entonces los apostolicos fue da de los apóstoles y la de los primeros fieles.
ron llamados dulcinistas por el nombre de su nuevo
gee, quemiraban como el fundador del tercer reinado. Apotaetitos ó Apotácticos, en griego
Seducidos por las pretendidas profecias del abad Joa
quin, que corrian por entonces, decian que el reinado ApoTARTyt
ºt CO.
Ay, compuesto de Apo y TACTo, yo re
del Padre habia durado desde el principio del mundo Es el nombre de una secta de antiguos hereges
hasta Jesucristo: que el del Hijo habia concluido el que renunciaban á todos sus bienes y querian impo
año 1300; que el del Espíritu Santo empezaba bajo ner á todos los cristianos la obligacion de hacer lo
la direccion de Ducino. Este publicó que el Papa Bo mismo, para seguir los consejos evángelicos é imitar
nilacio VIII, los sacerdotes y los frailes, perecerian el ejemplo de los apóstoles y de los primeros fieles.
al filo de la espada del emperador Federico III, hijo No parece que hayan incurrido al principio en
de Pedro, rey de Aragon, y que un nuevo pontífice, ningun error. Segun algunos autores eclesiásticos tu
mas piadoso seria colocado en la silla de Roma. Le— vieron vírgenes y mártires bajo la persecucion de
vantó tambien un ejército á fin de empezar á verificar Diocleciano en el siglo IV. Después cayeron en
él mismo sus predicciones. Reynier, obispo de Ver la heregía de los encratistas; de esto proviene que la
ceil, se opuso vivamente á este sectario, y durante sesta ley del código teodosiano incluye á los apotác
una guerra de mas de dos años se derramó mucha ticos en los eunomianos y arrianos. Segun S. Epifanio
sangre por una y otra parte. Ultimamente, vencido y se servian como los encratitas, de ciertas actas apó
hecho prisionero Ducino en una batalla, fue muerto crifas de santo Tomás y de S. Andrés, de las cuales
en Verceil el año 1307 con una muger llamada Mar es probable quesacaran sus opiniones.
garita, que habia tomado por hermana espiritual.
Desde aquel momento desapareció su secta en Ita Apoteosis, accion de colocar á un hombre en
lia. Se presume que sus restos se reunieron á los el rango de los dioses, No haremos mas que una re
valdenses en los valles del Piamonte; pero tambien lecsion acerca de este artículo, que pertenece á la
se hallaron algunos en Francia y en Alemania. Mos historia.
heim asegura que el año 102, uno de estos fanáti Si los paganos no hubieran colocado en el rango de
cos fué quemado vivo en Lubeck, Hist. cccles. del si los dioses ó de objetos de su culto mas que hombres
glo XIII, 2." part. c. 5, S. 1, nota. Cuando los pro recomendables por sus virtudes y beneficios, esta ce
teslantes declaman contra los suplicios que hicieron remonia, que atestiguaba la creencia de la inmorta—
padecer á estos sectarios, deberian tener presente lidad del alma, hubiera sido al menos una leccion
 APR 146 AQU
instructiva para las costumbres. Mas conceder los En este último sitio estaban colocadas las graderías ó
honores divinos á personajes tan viciosos y malva asientos de el clero, y entre otros, el trono del obispo,
dos como fueron la mayor parte de los emperadores,que estaba situado en medio ó en la parte mas des
era un ultraje sangriento hecho á la magestad divina, viada del altar. Este estaba en el otro estremo há
y la mas perversa instruccion que se podia dará los cia la nave, de la que estaba separada por una reja
pueblos; de esto deducian que no es la virtud la que ó baulastrada abierta. Se situaba sobre su estrado,
conduce al hombre á la felicidad eterna. Este abuso y sobre el altar se ponia el copon ó la copa, bajo una
demuestra hasta qué punto estaba degradada en - especie de pabellon ó dosel. Véase Cordemoy, Meina
tre los paganos la ¿ de la divinidad. de Trev, julio 1710, p. 1268 y sig. Fleury, Maeurs
Es una injusticia absurda el haber querido compa des Cret. tit. XXXV.
rar la apoteosis de los emperadores con la canoniza— Se hacian muchas ceremonias á la entrada ó bajo
cion de los santos, como han hecho algunos incrédu el arco del apsis, como imponer las manos, y reves
los; nunca ha tratado la Iglesia de conceder á los tir de sacos y cilicios á los penitentes públicos. Con
hombres los mismos honores que á Dios, ni ha colo mucha frecuencia se hace mencion en los antiguos
cado en el número de los santos, personages odiosos monumentos de los cuerpos de los santos que esta —
por sus vicios. ban en el apsis. Eran los cuerpos de los santos obis—
pos ó de otros santos, que se transportaban á este si
Aprobacion, Aprobar. Un sacerdote apro tio con mucha ¿ Synod. 3 Carth, can. 32
bado es el que ha recibido de su obispo la facultad Spelman.
de oir las confesiones V de absolver. Como es un ac— El trono del obispo se llamaba antiguamente apsis,
to de jurisdicion, el ¿ es dueño de limitar esta ¿ lo que algunos han creido que se daba este nom
aprobacion para el tiempo, lugar y casos que tenga re á la parte de la basílica en que estaba situado;
por conveniente: pero segun otros, lo habia tomado del sitio que ocu
Véase, sobre este punto, la doctrina del santo con paba. Se denominaba tambiea apsis gradata porque
cilio de Trento: «Pues que la naturaleza y el órden estaba elevado algunas gradas por encima de las si
del juicio ecsigen que una sentencia no pueda ser da llas de los sacerdotes, despues se llamó eachedra, des
da por un juez sino sobre sus súbditos, siempre se ha pues trono y tribuna.
creido en la lglesia de Dios, y el concilio confirma Apsis era tambien el nombre de un relicario ó de
esla verdad, que la absolucion pronunciada por un una urna, en que se encerraban antiguamente las re
sacerdote sobre aquel en quien no tiene jurisdicion liquias de los santos, y se llamaba así porque los re
sea ordinaria, sea subdelegada, no es de ningun va licarios se hacian en forma de arco ó de bóveda; tal
lor. (Sess. 14, c. 7.). Aunque los sacerdotes, en su vez tambien á causa del apsis en que estaban coloca
ordenacion, recibian la facultad de absolver los pe dos; de donde los latinos formaron la palabra capsa
cados, el santo concilio decreta que ningun sacerdo para esplicar lo mismo. Estos relicarios eran de ma
te, aun regular, no pueda oir las confesiones de los dera, á veces de oro, de plata, ó de otras materias
seculares, ni aun de los sacerdotes, ni ser conside— ¿ con relieves y otros adornos; se les coloca
rado como idóneo para este ministerio, á menos que a sobre el altar, que como ya hemos dicho, formaba
no posea un beneficio parroquial, ó que el obispo le parte del absis, que se ha denominado tambien el cru
dé gratuitamente despues de haberle ecsaminado, si cero de la Iglesia, y cuyo fondo, por lo general, estaba
lo tiene por conveniente, una aprobacion, no obs vuelto hácia oriente. Véase Ducange. Descript. Sain
tante todos los privilegios ó costumbres aun inmemo ta, Sophiae, Spelman, Fleury, loc.cit.
riales». Sess 23. De reformat. c. 15.
Un sacerdote que no es aprobado sino por un año
está obligado á renovar sus licencias al concluir el Aquila, autor de una version de la Biblia. Véase
VERSION.
año; el que es aprobado para tal parroquia, no tiene
facultad para confesar en otra; el que la tiene de ab
solver casos ordinarios ó no reservados, tiene necesi o SS AQUILA, llamado el , Pontico porque era
dad de un poder especial para absolver de casos re originario del Ponto, comarca del Asia ; abrazó el
servados. cristianismo bajo el imperio de Adriano, hácia el año
129 de J. C. Pero su terca aficion á los sueños
Apsis ó Absis, palabra usada en los autores de la astrología judiciaria dieron motivo á que se le
eclesiásticos para significar la parte interior de las arrojase de la Iglesia, y pasó á la religion judáica.
antiguas iglesias, en donde se sentaba el clero y Hecholenguarabino,
hebrea,adquirió un conocimiento
y se aplicó exacto de
á traducir el antiguo Tes
la
estaba colocado el altar.
tamento del hehreo al griego. Aunque su version, de
Se cree que se llamaba asi esta parte de la iglesia
porque estaba construida en forma de arco ó de bó la cual solo quedan fragmentos, fue hecha palabra por
veda denominada por los griegos Apsys, y por los la palabra sobre el testo hebreo, se descubre bien que
el designio de ocultar la vergüenza de su apostasía,
tinos absis. -

En este sentido, la palabra absis se toma tambien le obligó á torcer el sentido de los pasages favorables
por el presbiterio, por oposicion á la nace, ó á la al cristianismo. «Aquila, dice Bossuel, hizo espresa
parte de iglesia en que se colocaba el pueblo; viene de mente su version para contradecir la de los Setenta,
a ser lo que llamamos nosotros coro y santuario. .. la cual se servian las iglesias, á ejemplo de los
apóstoles; y para debilitar os testimonios relativos
El apsis se construia en figura emisférica y consistia
en dos partes, el altar ó santuario, y el presbiterio. á Jesucristo», Justiniano prohibió álos judios la lec
 A RA 1.7) ARA
tura de dicha version; sin embargo, dice san Geróni Niébuhr, que los yió en 1762 y 1763, los pinta de
mo, que examinando incesantemente la traduccion de muy diferente modo: dice que con respecto á esto no
Aquila, se encuentran en ella todos los dias muchas se les puede vituperar nada, Mr, de Pagés, que los
cosas favorables á nuestra creencia: lo cual prueba visitó poco tiempo despues, habla del mismo modo:
que Aquila no lo alteró todo, que muchas cosas se es viajes al rededor del mundo. l. 1, p. 307. Los árabes,
caparon á su mala intencion, y que la verdad, como dice, no se roban nunca entre sí, y viven muy social
sucede siempre, apareció triunfante de los artificios mente; pero con frecuencia se encuentra en guerra
del error. Feller, Biographie universelle. una tribu con otra, y entonces las hostilidades son re-.
cíprocas. No roban mas que en el desierto y reunidos
Arabe (Version) V. BIBLIA. en cuerpo de nacion; porque segun su antigua preo
cupacion, miran á todo estrangero desconocido como
Arabia. San Pablo mismo nos dice, Galat, c. 1, un enemigo, á menos que hayan hecho algun conve
y. 17 y sig, que inmediatamente despues de su con nio con él, y que no les haya pagado una especie de
version, fué á predicar á la Arabia y que permane tributo ó que no sea protegido por alguno de ellos;
ció en ella tres años. No puede dudarse que hizo con pero cuando lleva á un árabe por salvaguardia, no
versiones y fundó una iglesia. Entre los que fueron arriesga nada. Como se creen dueños y señores del
testigos de la venida del Espíritu-Santo sobre los desierto, dicen que un estrangero no tiene derecho
apóstoles en Jerusalen, el dia de Pentecostés, habia para pasar por sus tierras, sin su permiso y sin pa
algunos judios de la Arabia. Act, c. 2, y 11. Los in garles un tributo.
térpretes de la Escritura observaron que la conver Un célebre incrédulo, con el objeto de dar una
sion de los árabes habia sido predicha por Isaias, c. mala idea de los judios ha repetido diez veces que en
11, y . 14; en donde se dice que el pueblo del Señor su origen eran una horda de árabes beduinos. Aun
tomará los despojos de los hijos del Oriente; y c. 2, cuando este hecho no fuera evidentemente falso, na
y. 1, el profeta dice que los habitantes de Petrea, ciu da se seguiria, pues que segun el testimonio de los
dad de la Arabia, levantarán la voz desde la cima de viajeros, los árabes beduinos no son ni han sido ja
sus montañas y rendirán gloria á Dios. Con efecto, mas tales como este escritor los ha tratado de pre
los dos obispados principales de la Arabia, fueron Bos Senlar.
tros y Petrea, pero había otros muchos, y se encuen Mas vista la adhesion pertinaz que siempre han
tran los nombres de sus obispos en las suscripciones conservado á sus antiguas costumbres, se concibe que
de los concilios. no puede haber sido cosa facil el convertirlos al cris
No puede dudarse que los árabes son de la poste tianismo, y que para esto ha debido verificarse un
ridad de Ismael; se glorian al presente de descender gran cambio en sus hábitos é ideas. Sin embargo, el
de Abraham. Es el pueblo mas antiguo del mundo: año 207, el cristianismo se encontraba floreciente en
jamas han sido arrojados de su pais, subsistieron este pais; Orígenes hizo tres viajes para combatir di
siempre desde su primer establecimiento; no han ferentes errores; Berylo, obispo de Bostros, una de
cambiado ni su lenguaje ni sus costumbres, porque las principales ciudades de la Arabia, enseñó que an
no se han mezclado con ninguna otra nacion. Asi con tes de la encarnacion, Jesucristo no era una persona
servan todavia el carácter y las costumbres de su subsistente, que no era Dios despues de su encarna
padre Ismael; al anunciar su nacimiento el ángel del cion sino en un sentido impropio, y porque partici
Señor dice á su madre Agar: «Este será un hombre paba de la divinidad del Padre. En las conferencias
»salvage, su mano se levantará contra todos, y las que tuvo con Orígeues, abjuró su error, el año 229,
»manos de todos estarán contra él; levantará sus Eusebio Hist. ecles, l. 6, c. 20 y 33. Hácia el año 27,
» tiendas á la vista de sus hermanos. Gén. c. 16, y. Orígenes volvió á la Arabia para hacer condenar el
1. En vano han querido subyugará, los árabes, los error de los Arábigos, y se celebró un concilio con
egipcios, los griegos, los romános y los turcos; ja este motivo. Eusebio ibid. c. 37. Véase el artículo si
mas prevalecieron sus intentos por mucho tiempo. guiente. El año 269, el obispo de Bostros asistió al
Este pueblo se mantiene independiente, y prefiere la concilio de Antioquía. Tito, obispo de esta misma
libertad á todas las comodidades de las naciones civiciudad en el siglo IV, escribió un tratado contra los
lizadas. Hace cerca de cuatro mil años que se conser maniqueos que subsiste todavia. Se conjetura que
va siempre el mismo. Un hombre muy sensato que ha San Hipólito que vivió en el III, era obispo no de
viajado por ese pais dice que en la casa de un árabe Porto en Italia sino de Aden en Arabia, que los an—
se cree uno todavia transportado á la tienda de Abra tiguos llamaban Portus romanus. Véase la nota sobre
han ó de Jacob. Los del desierlo fueron convertidos Eusebio l. 6, c. 20.
hácia el año 373 por los monjes que habitaban en sus El cristianismo subsistió en esta parte del mundo
cercanías. Teodoreto, l. , c. 23; Sozom. l. 6, c. 38. hasta el nacimiento del mahometismo en el siglo sé—
Los de la Arabia feliz lo fueron bajo el imperio de timo; entonces desapareció completamente. Pero en
Constancio por un obispo arriano. Este pueblo es acu el quinto los nestorianos, y despues los eutiquianos,
sado por los antiguos de haber inmolado víctimas hu sedujeron á muchas personas, y se apoderaron de
manas; pero se puede atribuir esta barbarie á otras muchos obispados. No es tampoco cierto que toda la
muchas naciones. Arabia estuviese sumisa al Evangelio, pues que ha
Nuestros viajeros modernos nos advierten que no bia idólatras cuando Mahoma predicó sus errotes.
es cierto que los árabes en general, aun los que se
laman Beduinos, Srenitas, ó habitantes del desierto, Q. S" La prediccion de Moises relativa á Ismael
ean ladrones, pérfidos, sin leyes y sin costumbres. y á su posteridad, es una prueba pasmosa en favor de
 ARB
ARA (148)
la inspiracion divina que iba delante de la pluma del manzana, una pera, un higo, etc? A esta importante
mas antiguo de los historiadores. En efecto, los des cuestion respondemos que á Dios no le plugo reve—
cendientes de Ismael son como él, audaces, terribles, larnoslo. -

emprendedores. Convienen los antiguos escritores,

con los modernos viajeros que no bastó para conquis Arbol de la vida. Algunos comentadores que
lar á los árabes ni la fuerza de los grandes imperios, sin duda tenian mucho tiempo desocupado, han pre
ni el poder de sus vecinos los turcos. Y no solo se sentado la cuestion de si este arbol era el mismo que
el de la ciencia del bien y del mal. Nos parece que
. Inantienen ahora firmes contra las invasiones estra—
ñas, sino que el mismo Sesostris, que se denominaba la Escritura los distingue perfectamente; dice que
Rey de Reyes y Señor de los Señores, tuvo que formar Dios habia colocado en medio del paraiso el arbol de
una línea ¿. Heliópolis hasta Pelusa para poner el la vida y el arbol de la ciencia del bien y del mal. Gen.
Egipto al abrigo de los árabes. Y segun refiere Dio c. 2, y 9. La virtud que tenia el primero de prolon
doro de Sicilia, los árabes scenitas, los ismaelitas ó gar la vida, era natural ó sobrenatural? Esta cuestion
Nabateanos vivian á espensas del bolin que robaban es tan interesante como las fábulas forjadas por los
á los pueblos vecinos. Ni los asirios, ni los babilonios rabinos acerca de estos dos árboles maravillosos. Nos
lograron subyugar á los árabes. Mas aun, el mismo otros nos contentamos con observar que segun Salo
Alejandro magno despues de haber destruido la mo mon, la sabiduría es el arbol de la ¿ para todos los
narquía de los persas, y estendido sus conquistas hasta que la abracen. Prov. c. 3, y . 18, y que Jesucristo
el Ganges, formó el proyecto de acometer á los ára— muriendo sobre la cruz, ha formado un arbol de vida
bes; y cuando habia equipado soberbiamente una mas poderoso que el del paraiso. V. REDENcioN.
formidable flota, y reunido un ejército imponente Para dar una muestra de la perversidad,
para invadir la Arabia, dice Strahon, que cortó la y del ridículo que debe recaer sobre las objeciones de
muerte sus ambiciosos designios. Claro es pues que los Voltaire, basta su adjunto testo, seguido de un co
árabes scenitas eran independientes cuando los ma— mentario del abate Guenée.
cedonios destruyeron el reinado de los persas. Las
sucesivas empresas de los romanos, y cuantas tenta S. VI.
tivas se han hecho contra aquel pueblo indómito y
feroz, han acreditado cuán exactos son los rasgos con Entre los árboles del paraiso terrenal habia dos
que la sagrada Escritura le caracteriza, y cuán fiel es articularmente notables; el arbol de la vida, y el de
el cumplimiento con que sanciona la historia y el ciencia del bien y del mal. El primero no os emba
tiempo la prediccion de los libros divinos. raza (habla Guénee con Voltaire); convenís en que...
Testo.
Arábigos, secta de herejes que aparecieron en
Arabia hácia el año de Jesucristo 207. Enseñaban «Es facil imaginar un fruto que "¿
y dé la
que el alma nacia y moria con el cuerpo; pero que salud; lo cual se dice del coco y de los dátiles, etc.
resucitaria al mismo tiempo que este último: Euse (Dict.phil. Bibl. eapl.)»
bio, lib 6, c. 37, refiere que se celebró en la Ara Comentario.
bia misma, en el siglo Ill, un concilio al que asis
Es verdad, señor; pero tambien lo es que el fruto
tió Orígenes, que convenció tan claramente, á estos del arbol de la vida tenia una propiedad mas mara
herejes de sus errores, que abjuraron de ellos y se
reunieron á la Iglesia. villosa, y una virtud mas eficaz; no solo habria dado
la salud, sino que la hubiera hecho inalterable; En
Arbol de la etencia del bien y del manal. cuanto al arbol de la ciencia del bien y del mal, os
Se dice en el Génesis, c. 2, y 9, que Dios habia plan parece mas embarazoso. Creeis que...
lado en medio del paraiso el arbol de la ciencia del Testo. .
bien y del mal, y que prohibió al hombre que comiera No es facil formarse de él una idea exacta. (Ibid.).»
de su fruto so pena de la vida, y.17. Se pregunta por
qué Dios no queria que Adan conociese el bien y el Comentario.
mal, y cómo un fruto podia dar este conocimiento; Al menos vos no la teneis muy cabal. Os figurais
esta es una objecion antigua de los marcionistas y de que este arbol estaba destinado á hacer al hombre
los maniqueos. Tertul. ado. Marcion l. 2, c. 25; San
sabio en toda clase de materias; y al parecer por es
Agustin contra Faustum l. 22, c. le llamais tantas veces simplemente el arbol
Leemos en el Eclesiástico c. 17, y.5, que Dios ha ta razon Pero teneis alguna buena prueba de
bia dado á nuestros primeros Padres el don de la in de la ciencia.
teligencia, que les habia manifestado el bien y el mal. que este arbol debiesedar al hombre una ciencia uni
versal? Nosotros lo dudamos. Pero decis ademas...
Sin este conocimiento hubieran sido incapaces de pe
car. Pero Dios no queria que conociesen por espe Testo.
riencia la vergüenza, el pesar y los remordimientos «Es dificil concebir que haya habido un arbol que
de haber obrado mal, ni que pudiesen comparar es enseñase el bien y el mal como los hay de manzanas
le sentimiento con el de la inocencia. Héaqui lo que
les enseñó el pecado, y para esto no era necesario que y de albaricoques. (Ibid.)
el fruto de que comieron tuviese la virtud física de Comentario: ,
dar á conocer el bien y el mal. Un arbol que hubiera enseñado directamente y por
De qué especie era este fruto funesto? Era una
 ARB. 149) ARC

simismo el bien y el mal, hubiera sido en efecto di corruptible y revestido de láminas de oro, que Moisés
ficil de concebir. Pero es absolutamente inconcebi habia hecho construir por orden de Dios, en el cual
ble que comiendo el hombre de la fruta de este árbol encerró las dos tablas de la ley, un vaso lleno de ma
contra la prohibicion espresa de Dios, esperimentase ná, y la vara de Aaron que habia florecido en el ta
inmediatamente la rebelion de sus sentidos y la de— bernáculo. En él estaban indudablemente los obje
gradacion de su ser, y que conociese al punto por tos mas respetables de la religion judáica. Este cofre
una funesta esperiencia qué bien era para él obedecer, se llamaba arca de la alianza, porque la ley que en—
y qué males iba á acarrearle su desobediencia? triste cerraba tenia el título de la alianza que Dios habia
conocimiento que le hubiera sido mejor no adquirir hecho con su pueblo; fue colocado detras de un velo
jamás manifestais, pues, un deseo muy imprudente en el santuario del tabernáculo.
cuando decís.... La tapa de este core se llamaba propiciatorio; te
Testo. nia encima dos querubines de oro, cuyas alas esten
«Quisiera con todo mi corazon comer de la fruta, didas formaban una especie de silla, que era reputa
que colgaba del arbol de la ciencia: paréceme estra da como el trono de la Magestad divina. Los dos la
ña la prohibicion de comerla. Habiendo dado Dios la dos mas largos estaban armados cada uno de dos ani
razon al hombre, debia empeñarle á instruirse. ¿Que llos de oro por los que se introducian dos palos dora
ría ser servido por un tonto? (Quest. de Zapata). dos, que servian para transportar el arca. Dos sacri
ficadores ó dos levitas la llevaban sobre sus hombros,
Comentario. como en el dia sucede en las procesiones con las cajas
Quisiera con todo mi corazon, etc. Hijo de Adan, de las reliquias de los santos; este cuidado fue confia
os pareceis mucho á vuestro padre!. Del arbol de la do con especialidad á los descendientes de Caat, hijos
ciencia, etc. Acabais de ver cuán dolorosa era esta de Leví. -

El arca, construida al pie del monte Sinaí el año

ciencia. ¿La desearíais todavia?; y creereis que el
hombre haya perfeccionado mucho su razon adqui del mundo 251, viajó por espacio de cuarenta años
riendo aquella ciencia? en el desierto con Moisés y Josué. Despues del paso
¿Queria ser servido por un tonto? No señor; Dios del Jordan, fue colocada en Galgal en la Palestina, en
que habia adornado el entendimiento de Adan con donde permaneció cerca de siete años; de alli fue
tantos conocimientos no queria ser servido por un transportada con el tabernáculo á Silo, en donde es—
tonto; queria serlo por un espíritu docil y sumiso, que tuvo trescientos veinte y ocho años. El año 2888, los
respetase sus órdenes y supiese reprimir un deseo or Israelitas la sacaron para llevarla á su campo. Dios
gulloso de saber. Vos lo decís en otra parte.... º
que se apoderaran de ella los filisteos, entre
os que permaneció siete meses; por los azotes con
Testo. que Dios los afligió, se vieron obligados á volverla á
«Confiesan los intérpretes que jamás se ha conocido enviar á Bethsamés: algunos Belhsamitas que qui
árbol alguno que diese la ciencia. No nos dicen esta sieron ver por curiosidad lo que contenian fueron he
alegoria que la ciencia mal entendida es capaz de per ridos de muerte. Desde alli fue conducida á la Caria
dernos?» (Homel. Rab. Akib.) thiarin y colocada en la parte mas elevada de la ciu
dad de Gabaa, en la casa de Abinadal, en donde estu
Comentario. vo setenta años. David la sacó de alli el año del mun
Capaz de perdernos, etc. Escelente leccion, señor! do2959: al transportarla, queriendo Oza sostenerla
Procuremos aprovecharla. Esta alegoria, etc. Si lo con la mano cayó muerto. Atemorizado David no se
fuera, convenid en que contendria una instruccion atrevió á conducirla á su casa y la depositó en casa de
utilísima. Observais que habia dicho Dios.... Obededom. Tres meses despues la transportó á su
palacio sobre el monte Sion: alli estuvo cuarenta y
Testo. dos años, hasta que Salomon la colocó en el santua
«Luego que comieres de ella (de la fruta) morirás; rio del templo que acababa de construir: permaneció
que sin embargo la comió Adan y no murió. (Earam. en este sitio cerca de cuatrocientos años hasta el si
imp. Bibl. en fin eapl.) tio de Jerusalen por Nabucodonosor.
Durante este sitio, Jeremías la ocultó en un subter.
Comentario. -
ráneo á fin de que no cayera en manos de los caldeos:
Y no murió ..., ¿Y qué se infiere de esto, señor? despues de su retirada, la hizo transportará una ca
Que movido Dios del arrepentimiento del hombre, verna del monte Nebo, situada mas allá del Jordan y
se dignó suspender el efecto de sus amenazas, y con célebre por la sepultura de Moisés, y cerró su entrada.
servarle la vida para darle tiempo de reparar su fal La historia no dice que fuera sacada de alli: los judios
ta; ó que las palabras morirás de muerte, no signi están siempre en la persuasion de que no existia en
ficaban morirás al punto, sino quedarás sujeto á morir. el segundo templo construido por Zorobabel. Véase ,
Estas dos respuestas se han dado mucho antes que 2. Macabeos c. 2. Véase en las láminas de la historia
nosotros: bastaria la primera para todo lector sin antigua la figura del arca de la alianza. En la Biblia
prevencion. Convenid pues, señor, que habeis pro de Aviñon, t. XII p. 523 hay una disertacion en que
puesto una dificultad insignificante. se examina si esta arca fue ocultada por Jeremías, y sí
Léase ademas la nota XIV de las Vindicias de la debe volverá aparecer algun dia.
Biblia por el abate Du-Clot, sobre el y, 9 del cap. II. Los judios modernos tienen en su sinagoga una
del Génesis. -
especie de arca ó de armario en el cual encierran sus
Area de la alianza. Cofre de una madera in libros sagrados á imitacion del arca de la alianza, la
TOM0 l. - 23
 * AIC. 150 ARC
llaman Aron. Tertuliano habla ya de ella y la deno las fuerzas de los hombres de la primera edad del
mina armarium judaicum, de aqui viene la espresion mundo, que siempre se los ha tenido como mucho
poner en el armario de la sinagoga, por decir, poner mas robustos que los de los tiempos posteriores. Por
en el número de los libros canónicos. medio de estas reflexiones se puede responderá las
S" El impio Voltaire, cuyo furor contra la reli objeciones de los que dicen que el primogénito de los
gion era llevado hasta el mas detestable y sacrílego hijos de Noé no nació sino muy próximo á la época
estremo, trató de poner en ridículo en su Biblia espli en que se comenzó el arca;... que el mas joven no vino
cada lo que refiere la sagrada Escritura acerca del al mundo sino cuando estaba muy adelantada la obra
castigo ejemplar que hizo Dios con los Bethsamitas, que por consiguiente pasó mucho tiempo antes de que
por haber sido curiosos escudriñadores de lo que el pudieran ausiliar á su padre. Se destruye tambien lo
arca contenia, quebrantado en esta manera lo que el que otros objelan. que es imposible que tres ó cuatro
Señor habia mandado; pero de este lugar, como en hombres bastaran para construir una casa, para la
todos los que toma por asunto de su sarcástica impie cual era preciso emplear una prodigiosa cantidad de
dad el filosofo de Ferney, no hace mas que reproducir árboles, y un número infinito de brazos para darlos
antiguas y desacreditadas objeciones, con el solo in forma. Quién sabe por otra parte si Noé no echó ma
lento de imponer á los incautos, combatiendo lo que no de olros obreros?
detesta su pervertido corazon. Los que deseen con 2." La madera que se empleó para construir el
vencerse de la mala fé, y falta de crílica y veracidad arca se llama en la Escritura hetsé gopher, que los
de Voltaire, pueden consultar el Diccionario de la re Setenta traducen por madera cuadrada; Unkelos y
ligion del jesuita Nonote, los comentarios del abate Jonatan, madera de cedro: S. Gerónimo, madera ta
Guénée, y sobre este punto las Vindicias de la Biblia llada ópulimentada, y por otra parte madera embrea
del abate Du-Clot, nota VIII, sobre el versículo 19, del da ó untada de belun; Kimechi dice que era una ma
capítulo VI, del libro I de los Reyes, y la nota Il, so dera ligera; Vatablo una madera que permanece en
bre el y. 20 del cap. VI del libro ll de los Reyes. el agua sin corromperse; Junio, Trémello y Buxtorf,
una especie de cedro llamado por los griegos kEDRE
Area de Noé, especie de navio ó de casa flo LATE. M. Le Pelletier de Rouen piensa del mismo mo
lante que fue construida por Noé á fin de preservar del do, º esla madera incorruptible es muy comun
diluvio á su familia y á las diferentes especies de ani en el Asia. Segun Herodolo y Aristófanes, reyes
males que Dios habia mandado á este patriarca en del Egipto y de Siria empleaban el cedro en lugar del
trarán en ella. V. DILUvio. abeto para la construccion de sus flotas; mas no debe
Los críticos han hecho las mayores investigaciones darse mucho asenso á la tradicion recibida en todo el
é imaginado diferentes sistemas, sobre la forma, gran Oriente, que opina qre el arca se conserva hasta
dor y capacidad del arca de Noé, sobre los materiales ahora toda entera sobre el monte Ararat.
empleados en su construccion, sobre el tiempo que Bochard sostiene que gopher es el cipres, porque en
fue necesario para concluirla, acerca del sitio en que la Armenia y en la Asiria, en donde se construyó pro
se detuvo cuando se retiraron las aguas del diluvio, &. bablemente el arca, no existe mas que el ciprés que
Recorreremos todos estos puntos con la brevedad que sea á propósito para construir un largo navio tal como
nos sea posible. el arca. Arriano lib. 7. y Strabon, lib. 16 cuentan que,
1.° Se cree que Noé empleó cien años en construir queriendo Alejandro hacer construir una flota en Ba—
el arca, á saber desde el año del mundo 1555 hasta el bilonia, se vió obligado á hacer traer cipreses de Asi-,
de 1656, en cuyo tiempo tuvo lugar el diluvio. Esta ria. Luego no es verosimil que Noé con sus hijos, obli
es la opinion de Orígenes, l. , contra Celso; de San gados á hacer un navio tan vasto en tan poco tiempo,
Agustin, de Civitate Dei l. 15, c. 27; contra Faust, tuvieran tambien necesidad de trasportar desde muy
lib. 12, c. 18, Quast in Genes. n. 5 y 23; de llu lejos las maderas de construccion.
perto sobre el Génesis lib. I, c. 22. A estos le siguie Por último otros creen que el hebreo gopher signi
ron Saliano, Spondo, Le Pelletier, etc. Otros intérpre fica en general madera gruesa y resinosa, como el pi
tes prolongan este término hasta ciento veinte años. no, el abeto y el terebinto. No debe creerse en las fá
Beroso asegura que Noé no empezó á construir el arca bulas que los mahometanos han forjado con este
sino setenta y ocho años antes del diluvio; un rabino motivo.
no cuenla mas que cincuenta y dos; los mahomelanos 3.º Segun Moisés, el arca tenia trescientos codos
no dan á este patriarca mas que dos años para cons de larga, cincuenta de ancha y treinta de altura. Mu—
truirla, Por el testo del Génesis por una parte es cierto chos críticos dicen que estas medidas no daban una
que el diluvio sucedió el año seiscientos de Noe, y por capacidad suficiente para contener todos los animales
otra que era de quinientos años de edad cuando tuvo y las provisiones que debia encerrar el arca. Celso se
á Sem, Cam y Jafet: de lo que se deduce que lo mas mofaba de ella, y ha denominado á esta casa el arca
probable es la opinion de Beroso. En efecto segun el del absurdo.
padre Fournier en su hidrografia y segun la opinion Para resolver esta dificultad, los Padres y los co
de los Padres, Noé fue ayudado en su trabajo por sus mentadores han tratado de averiguar la longitud del
tres hijos: estas cuatro personas fueron suficientes pa codo de que habla Moisés. Orígenes, S. Agustin y
ra concluirla; pues que Arquias de Corinto, con el au otros, piensan que se trataba de los codos geométricos
silio de tresciensos obreros, construyó en un año el de los egipcios, que contenian, segun ellos, seis codos
gran navio de Hieron, rey de Siracusa. vulgares ó nueve pies. Pero no se vé que hayan esta
Aun cuando se supusiera el arca mucho mayor, y do en uso estos codos entre los Hebreos. En esta
construida en setenta y ocho años, debia atenderse a suposicion el arca lendría 2,700 pies de longitud; lo que
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unido á las demas dimensiones le hubiera dado una bia. Mr. Le Pelletier y Budeo la dan mucho menos,
capacidad enorme y supérflua. Algunos han dicho que porque si se los multiplicaba demasiado, cada una de
los hombres de aquella época eran mayores que los las ocho personas que estaban en el arca tendria cua
del dia, y su codo era tambien mas largo, pero por la renta ó cincuenta habitaciones que cuidar y limpiar
misma razon, los animales debian ser tambien mayo todos los dias; lo que es imposible.
res y ocupar mas lugar. Tal vez hay tanta dificultad en disminuir el núme
Otros suponen que Moises habla del codo sagrado, ro de las habitaciones, á menos que no se disminuya
ue tenia una cuarla mas de longitud que el codo or el número de los animales; parece mas difícil tener
inario, pero no parece que esta medida se emplea cuidado de trescientos animales en setenta y dos de
ra en otra parte mas que en los edificios sagrados co partamentos, que si cada uno ocupara el suyo.
mo eran el templo y el tabernáculo. Budeo ha calculado que todos los animales encer
Budeo y el padre Kircher parece que han estado rados en el arca no debian ocupar mas lugar que qui
mas acertados, suponiendo el codo de la longitud de nientos caballos ó cincuenta y seis pares de bueyes.
pie y medio. Prueban geométricamente que con esta El padre Lamiasciende este número á sesenta y cua
medida el arca era muy suficiente para contener to tro pares ó ciento veinte y ocho bueyes. Segun él, su
dos los animales y todas las provisiones necesarias poniendo que dos caballos no ocuparan mas espacio
para alimentarlos por un año. Con respecto á esto la que el de un buey, si el arca tuvo espacio para dos—
opinion de MM. Le Pelletier, Graves, Cumberland y cientos cincuenta y seis caballos, pudo contener to
Newton presenta menos dificultades, dan al antiguo dos los animales; demuestra que un solo piso podia
codo hebráico la misma longitud que al antiguo codo contener quinientos caballos, contando nueve pies
de Menfis, es decir, cerca de veinte pulgadas y me cuadrados para cada caballo.
dia, medida de Paris. Por lo que respecta á los alimentos contenidos en
Snelio ha pretendido que el arca tenia mas de una el segundo piso, Budeo hace observar que treinta ó
yugada y media de superficie: Cuneo y Bndeo no han cuarenta libras de heno bastan comunmente á un buey
calculado del mismo modo; Arbuthnot cuenta que para su alimento diario, y que un codo sólido de he
tenia 326,80 pies cúbicos de capacidad. El padre no, apretado como está en los graneros ó almacenes,
Lami juzga que era cien pies mas larga que la igle pesa cerca de cuarenta libras. Ahora bien parece que
sia de S. Merry de Paris, y sesenta y cuatro pies mas el segundo piso tenia ciento cincuenta mil codos cú
estrecha. Su traductor inglés añade que era mas lar bicos. Si se dividen entre doscientos y seis bueyes, se
¿ que la iglesia de S. Pablo en Londres, desde el tendrán dos tercios de heno mas de lo que pueden co
mer en un año.
te al Oeste; y que tenia sesenta y cuatro pies de
altura, ¿ la médida inglesa. Segun el cálculo de Wilkins, todos los animales
º Ademas de las ocho personas que componian carnívoros son equivalentes por su corpulencia y ali
la familia de Noé, el arca contenia un par de cada mento á veinte y siete lobos; y todos los demas á dos
especie de animales impuros, y siete de animales pu cientos ocho bueyes. Para el alimento de los primeros
ros, con su provision de alimentos para un año. A pone mil ochocientos veinte y cinco ovejas, y para el
primera vista, esto puede parecer imposible; pero de los segundos ciento nueve mil y quinientos codos
cuando se calcula se ve que el número de animales de heno; los dos primeros pisos eran mas que sufi
no es tan grande como se imagina. No conocemos mas cientes para contener el todo. Por lo que respecta al
que ciento ó á lo mas ciento y treinta especies de tercero, todo el mundo conviene en que habia mas es
cuadrúpedos próximamente, otras tantas de aves, pacio que el necesario para las aves, Noé y su fa
y cuarenta especies de los que viven en el agua. Los milia, y para su alimento.
naturalistas cuentan generalmente ciento setenta es Este sabio obispo observa que es mas difícil eva
pecies de aves. Wilkins obispo de Chester dice luar la capacidad del arca, que el encontrar lugar su—
que no existian mas que setenta y dos especies de ficiente para todas las especies de animales conoci—
cuadrúpedos que estuviesen necesariamente en el dos. La causa es la imperfeccion de nuestros catálo
CIrca.
gos de animales, principalmente de los de las partes
5.º. Segun la descripcion que Moises hace de este del mundo que no estan todavia frecuentadas y sufi
edificio, parece que tenia tres pisos, teniendo cada cientemente conocidas. Añade que el mas hábil ma
uno diez codos ó quince pies de altura. Probable— temático de nuestra época no determinaria mejor las
mente el piso mas bajo estaria ocupado por los cua dimensiones de un navio tal como el arca, que lo es
drúpedos y los reptiles, el de enmedio por las provi— tan en la Escritura relativamente al uso á que estaba
siones y el de arriba por las aves, por Noé y su destinada: de lo quededuce que la narracion de Moises,
familia; cada piso debia estar dividido en varias ha con la cual se ha querido hacer una objecion contra
bitaciones, Filon, Josefo y otros comentadores, ima la verdad de la Sagrada Escritura, es mas bien una
ginan tambien un cuarto piso debajo de los otros, que prueba de esta misma. Efectivamente, es de suponer
era como la sentina del navio, que contenia el lastre que en las primeras edades del mundo; los hombres,
y los escrementos de los animales. menos ejercitados que lo estan en el dia en las cien
Dreselio cree que el arca estaba dividida en tres cias y en las artes, debian incurrir en mas errores de
cientos cuartos o habitaciones; el padre Fournier cálculo; sin embargo, si en el dia hubiera necesidad
cuenta trescientos veinte y tres; el autor de las Cues de proporcionar un navio á la masa de los animales y
tiones sobre el Génesis, cuatrocientos. Rudeo, Arias á su alimento no lo harian mejor; por consiguiente el
Montano, Wilkins y el padre Lami suponen otros arca no puede ser una invencion del entendimiento
tantos departamentos como especies de animales ha humano. En igual caso, los hombres estan espues
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 ARC (152) ARC
tos á agrandar prodigiosamente los objetos; hubiera de agua salada mezclada con dos terceras partes de
sucedido con las dimensiones del arca de Noé, lo que agua dulce, es todavia una bebida insoportable. Co
con la evaluacion del número de estrellas á la simple mo el arca dejó de flotar sobre las aguas el dia vein
vista. Del mismo modo que se juzga desde luego es te y siete del séptimo mes, permaneció en seco sobre
número de las estrellas infinito, se hubieran calcula las montañas de Armenia por espacio de siete meses,
do las dimensiones del arca de una magnitud desme cuyo tiempo Noé no podia procurarse el agua de
surada y se hubiera producido una cosa mucho ma Ul6Ia.

yor de lo que era necesario; el historiador pecaria El padre Juan Budeo, natural del Delfinado, re
mas por el esceso de capacidad que la hubiera dado, ligioso de la Orden de S. Antonio de Venecia, en su
que los que atacan su historia al pretender que peca Tratado del arca de Noé escrito en el siglo XVI, su
por defecto. pone que el codo de que habla Moises no tenia mas
Mr. Le Pelletier, de Rouen y Budeo han llevado que diez y ocho pulgadas como el nuestro; apesar de
mas allá la exactitud y la precision;, veamos el es todo no deja de encontrar en las dimensiones dadas
tracto de su trabajo, al como nos le ha suministrado por Moises todo el espacio necesario para alojar en el
Calmet, en su disértacion sobre el arca de Noé. arca los hombres, los animales y las provisiones.
El primero supone que el arca era un edificio de la Cree que el arca se componia de muchas clases de
forma de un paralelepípedo rectangular; cuya altura madera gruesa y resinosa, untada de betun del que
interior puede dividirse en cuatro pisos. Da tres co abunda mucho la Asiria, que tenia la forma de un
dos y medio al primero, siete al segundo, ocho al ter paralelepípedo, con las dimensiones que la da la Es
cero, y seis y medio al cuarto; los cinco que restan de critura arregladas á nuestro codo.
los treinta de altura los distribuye para los gruesos Supone cuatro pisos, el primero de cuatro codos
del fondo, de la cubierta y de los tres puentes ó sue de altura, el segundo de ocho, el tercero de diez y el
los de los tres últimos pisos. último de ocho: destina el primero para que sirva de
El primer piso era el fondo ó lo que se llama la ca sentina, el segundo para los establos, el tercero para
rena en los navios; el segundo servia de granero ó al las provisiones, y el mas alto para mansion de los
macen; en el tercero estaban los establos; en el cuar hombres, de las aves, de los utensilios, etc. Coloca
to las pajareras. Pero como la carena no se contaba la puerta á veinte codos de distancia de la estremi
por un piso y no servia mas que de depósito de agua dad de uno de los lados, la hace abrir y cerrar como
dulce, el arca no tenia sino tres, propiamente tales, ¿ levadizo; pone la ventana á la parte de arri
segun dice la Escritura, aunque los comentadores ha a del departamento de los hombres, y dice que los
yan supuesto cuatro, contando la carena; animales no tenian necesidad de luz. La parte media
No cuenta mas que treinta y seis establos para los de la cubierta la da un codo de altura en toda su lon
animales terrestres y otros tantos para las aves: ca gitud.
da establo podia tener quince codos y cuatro novenos En el segundo piso pone un pasadizo de seis codos
de largo, diez y siete de ancho y ocho de altura: por de altura por trescientos de largo, otro que le corta
consiguiente veinte y seis pies y medio de largo, vein en ángulos rectos y otros dos paralelos. Por esta dis
te y nueve de ancho, y trece y medio de altura: por tribucion forma cuarenta establos pequeños ó celdas,
que M. Le Pelletier da á su codo veinte pulgadas y sesenta grandes y cuarenta medianos.
media, medida de Paris. Las treinta y seis pajareras Reduciendo ahora todos los animales encerrados en
tenian la misma estension que los establos. el arca á la magnitud del buey, del lobo y del carnero
Para cargar con igualdad el arca, Noé pudo llenar juzga que eran todos equivalentes á ciento veinte
los establos y las pajareras, empezando por la de en ueyes ú ochenta lobos y otros tantos carneros. Dice
medio, de los animales mas corpulentos y de las aves que los establos tales como los supone, podian con
mayores. Un cálculo exacto demuestra que podia con tener sesenta pares de bueyes, cuarenta de lobos y
tener la carena mas de treinta y un mil ciento setenta cuarenta de carneros. Para alimentar á los animales
cuatro barriles de agua dulce, mas cantidad que carnívoros, cree que podian bastar tres mil seiscien
l, necesaria para dar de beber durante un año á tos cincuenta carñeros dándoles diez por dia ó uno
cuatro tantos mas de hombres y animales de los que para cada cuatro.
contenia el arca. Lo mismo sucede con la capacidad Coloca agujeros en las tablas por debajo, para que
del granero para contener el alimento necesario para los escrementos de los animales caigan á la sentina
todos por un año. sirvan de lastre; asi como respiraderos que suben
En el tercer piso pudo Noé construir treinta y seis asta el último piso, para renovar el aire y evitar la
departamentos para encerrar en ellos los utensilios infeccion.
de la casa, losinstrumentos de labranza, los granos, las Dividiendo el tercer piso como el segundo, encuen
simientes, etc.; una cocina, una sala, cuatro cuartos, tra suficiente espacio para colocar todas las provisio
y un espacio de cuarenta y ocho codos para pasearse. nes, todas las cómodidades que podian necesitar Noé
M. Le Pelletier coloca la puerta del arca no en uno y su familia, y la facilidad para cuidar sin mucho
de los lados de la longitud, en donde hubiera perju irabajo las diferentes especies de animales. Toda la
dicado á la simetria y quitado el equilibrio, sino en capacidad del arca segun su cálculo, y dando al co
una de sus estremidades. do diez y ocho pulgadas, era de seiscientos setenta y
Algunos han creido que era inútil un depósito de cinco mil pies, cuatrocientos cincuenta de largo, se
agua dulce, que el agua del mar mezclada con las tenta y cinco de ancho y cuarenta y cinco de alto.
aguas del diluvio podia ser bastante potable; se en Por ingeniosas que sean las ideas del padre Budeo
gañan: la esperiencia prueba que una tercera parte y por exacto que sea su cálculo, Mr. Le Pelletier
 ARC
encuentra muchas dificultades en su sistema. 1.° El
codo de que habla Moises era el de Menfis, una sépti
ma parte mas corto que el de París. 2.” Un edificio
chato y cuadrado, más largo y ancho que alto, no
tiene necesidad de lastre para impedir el que vuelque
de cualquiera manera que se le cargue. 3." Los ani
males estarian mal colocados entre estiercol y provi
siones, debajo del agua, privados de la luz y con pe
figro de sofocarse; se evitan estos inconvenientes po—
niéndolos en el tercer piso. ...” Pudiendo ascender el
peso de los animales á setenta millares, al paso que
el de las provisiones podia llegará setenta millones
de carga, no es conveniente el colocar las provisio—
nes encima de los animales. 5.º La puerta colocada
á uno de los lados del arca, con un pasadizo vacío en
153 ARC
lletier de Rouen se encuentra en la Mem. de Trevous
del año 1702.
Algunos incrédulos que no podian oponer nada só
lido á las obras que acabamos de estractar, se limitan
á ponerlas en ridículo; este es su último recurso. Pe
ro aunque los diversos sistemas sobre la estructura
del arca no sean mas que conjeturas, demuestran, no
obstante, que los comentadores que han tratado de
ilustrar la narracion de los libros santos tuvieron en
general mas capacidad, luces, erudicion y juicio que
los que hacen profesion de despreciar los antiguos
monumentos sin poder darse una razon de ello. Véa
se entre las láminas de la historia antigua la figura
del arca de Noé.
-

toda su estension, hubiera hecho al arca mas pesa Arcangel, substancia enteligente ó angel de se
da de un lado que del otro, é incómoda en su totali gundo orden de la gerarquía celestial. Véase ANGEL y
dad, etc. GERARQUÍA. Se llaman espíritus arcángeles, porque son
Pero, como observa Calmet, hay pocos autores que superiores á los ángeles del primer órden, de la pa
al tratar esta materia, no hayan incurrido en algu labra griega ARKE principado y de ANGELos ángel: san
nos inconvenientes. Los unos han hecho el arca de Miguel es considerado como el príncipe de los ángeles,
masiado grande, otros muy pequeña, y muchos poco y se le llama generalmente el arcángel S.Miguel.
sólida; la mayor parte no visto en la historia del
diluvio mas que las dificultades que pueden atañerá Arcediano. (Derecho eclesiástico.) Es—
la capacidad del arca, sin fijar la atencion en las que te nombre se dió antiguamente al diácono mas an
podian resultar de su forma, distribucion, departa— ciano, ó al que el obispo elegia para presidirlos. Hoy
mentos y habitaciones, de la manera con que era pre dia es un eclesiástico provisto en una dignidad que
ciso dar á los animales el alimento, la luz, el aire y le da una especie de jurisdicion. De esta palabra se
la limpieza. Mr. Le Pelletier la ha ilustrado y pre formaron las de arcedianato para designar el oficio á
venido en su Disertacion sobre el arca de Noé, c. 52. su dignidad y la parte del territorio que está sujeta y
6.º. En qué sitio se detuvo el arca despues del di la vista del arcediano, cuya estension ha designado
luvio? Algunos creen que fué muy prócsimo á Apa el obispo. El orígen de esta dignidad es del tiempo
mea, ciudad de Frigia en el rio Marsyas, porque es— de los apóstoles, que eligieron entre los primeros
ta ciudad tenia por sobrenombre el arca, y sus me— cristianos aquellos mas celosos y vigilantes para con
dallas tenian un arca. Pero lo mas probable es que es fiarles el cuidado de los pobres y encargarles las dis
ta ciudad se llamase kynotos, arca, porque estaba tribucion de las oblaciones de los fieles. El primero
situada en un valle muy estrecho, y encerrada como que se honró con este título fue S., Esteban, á quien
en un cofre; parece que es la misma la significacion S. Lucas llama el primero de los diáconos, Sus fun
del nombre propio Apamea. En los versos sibilinos se ciones se reducian entonces á la distribucion de las
lee que el monte Ararat, en donde se detuvo el arca, limosnas solamente; pero el manejo del dinero y de
está en los confines de la Frigia, en el origen del rio las riquezas de la Iglesia hizo que se reputasen muy
Marsyas y este es un error. Todo el mundo sabe que pronto superiores los arcedianos á los presbíteros, los
este monte está en Armenia. Josefo el historiador, cuales, limitados puramente á las funciones espiri
hablando de Yzates, hijo del reyde la Abdiabena, di tuales, como la oracion, la instruccion y adminis
ce que su padre le dió en la Armenia un canton lla tracion de sacramentos, tuvieron menos crédito y
mado Haeron, en donde se veian restos del arca de autoridad: esto es lo que vamos á desenvolver. Los
Noé. Cita á Beroso, historiador caldeo, que dice que diáconos fueron establecidos primeramente para ali
en su tiempo se veian restos del arca sobre las mon viar á los obispos y presbíteros en las funciones este—
tañas de la Armenia. Antiq, lib. 1.° c. 5.” l. 20. c. 2. - riores del gobierno de la Iglesia; el título de arcedia
Nicolás de Damaso, S. Teófilo de Antioquía, san no se dió al que el obispo consideraba por mas hábil
Isidoro de Sevilla, citan la misma tradición; Juan y vigilante; despues, al tiempo de conferirle este
Stuys, en sus viages dice que en 1670 un hermitaño iítulo, le encargaban una parte de su jurisdicion.
de este canton le aseguró tambien este hecho; esto es Asi es, que los arcedianos eran entonces lor vicarios
una fábula. Mr. de Tournefort que ha estado en estos generales del obispo, y ejercian en su nombre la ju—
sitios, atestigua que la montaña de Ararat es inacce risdiccion episcopal en las iglesias de su territorio;
sible, que desde la parte media hasta la cima está cu los consideraban como sus ojos y sus manos; en la
bierta de nieve, que no se deshace nunca, y al través iglesia tenian cuidado de que se conservase en ella
de la cual no es posible abrirse paso. Los armenios el orden y decencia en el servicio divino; eran los
mismos tienen como tradicion que en razon á este maestros y superiores de los clérigos; señalábanles
obstáculo ninguno desde Noé ha podido subir á esta sus puestos y funciones; si no habia ecónomo, reci
montaña ni dar noticias de los restos del arca; solo sin bian las oblaciones y rentas de la iglesia, y cuidaban
pruebas y por simples relaciones populares es por lo de la subsistencia de los clérigos y de pobres;
que algunos viageros dicen que se ven todavia res eran los censores de las costumbres, y vigilaban pa
tos. Véase la Disertacion de Calmet; la de Mr. Le Pe ra corregirlas; advertian á los obispos todos los des
 ARC 13%) ARC
órdenes, y ejercian casi las funciones de los promo— el diario de las Audiencias se encuentra un decreto
tores actuales para repararlos. La estension de su po de 16 de junio de 160, por el cual se le mantuvo en
der y de las funciones que ejercian los colocaba en la la posesion de visitar la colegiata de Blesion, situada
gerarquía eclesiástica inmediatamente despues del en su arcedianato, al arcediano de Outre-Loire, de
obispo. En el siglo VI les concedieron jurisdicion la diócesis de Angers.
sobre los presbíteros y en el XI eran ya como unos Se les permite á los arcedianos visitar en persona,
jueces ordinarios que tenian de oficio uña jurisdicion siendo á su costa, las parroquias en donde son curas
ropia, y potestad para delegarla: ejercian á nom— los religiosos, aquellas en donde los cabildos preten
re suyo el mismo derecho de que gozaban como de— den tener un derecho de visita, y aun las que perte—
legados del obispo. Muchos en Francia tuvieron tam necen á las encomiendas de la Orden de Malta. Por lo
bien pretensiones de juzgar en primera instancia to que hace á las iglesias parroquiales, establecidas en
dos los negocios eclesiásticos de su arcedianato y de los monasterios que son esentos de la jurisdicion de
poder nombrar un juez que dicidiese lo perteneciente los ordinarios, solo el obispo puede visitarlas en per—
á la jurisdicion contenciosa. Pero á principios del sona. El arcediano solo debe visitar una vez al año
siglo XIII trataron los obispos de reducir á sus justos las iglesias parroquiales, á menos que ocurra alguna
límites estas pretensiones de los arcedianos, que se razon importante que le obligue á visitar segunda vez
habian apoderado de casi toda su jurisdicion; qui dentro del mismo. Tiene que visitar todas las capi—
táronles la jurisdicion voluntaria, estableciendo los llas domésticas, y hacer que le den cuentas las cofra
vicarios generales, y la contenciosa, nombrando pro días que suele haber en las capillas de los palacios
visores, y redujeron la que les quedaba multiplican— de los señores. Las apelaciones de lo dispuesto en la
do los arcedianatos. Los cánones de muchos conci— visita por los arcedianos se deben presentar al obispo,
lios sostuvieron á los obispos en su derecho; y siem— y no al vicario general; porque los arcedianos son
pre que recurrieron á los tribunales seculares que considerados como vicarios generales del obispo, y
jándose de las usurpaciones de los arcedianos, los poseen por el título el arcedianato, que les da una es
parlamentos las declararon abusivas, y redujeron la pecie de jurisdicion. Le pertenece tambien al arce
jurisdicion de los arcedianos á sus límites. Ya no lesdiano el derecho de presentar al obispo los que deben
ha quedado mas que el derecho de visitar las iglesias ser ordenados, asistir al ecsamen de los que deben re
de su arcedianato; formar las sumarias del estado cibir las órdenes, y poner ó mandar poner en pose
en que se hallan las parroquias; oir las quejas que sion de los beneficios curados á los que son legítima
dan los feligreses contra los curas párocos; exami mente provistos en ellos. El que ejercia antes las
nar las cuentas de las rentas de fábricas, y estable funciones de arcediano no podia ordenarse de pres—
cer el arreglo en la recaudacion y empleo de sus bítero sin perder su dignidad; despues que los arce
productos. Asi se determinó por el artículo 17 del dianos se ¿ ordinarios, y no ejercieren juris
mes de abril de 1695. Segun el artículo 1 del mis— dicion sobre los párrocos, como vicarios del obispo,
mo edicto, deben los arcedianos, un mes despues de se les precisó á que ascendiesen al presbiterado, á
concluida su visita, remitir las sumarias que hayan fin de que los párrocos no estuviesen sujetos á una
formado á los arzobispos ú obispos, para que estos ersona inferior á ellos por la ordenacion: tambien
dispongan lo que les parezca más útil á beneficio de arcedianos deben ser licenciados en teologia y de
la Iglesia. recho canónico, aun cuando no tengan que ejercer
Los arcedianos, que estan en posesion de hacer funciones de jurisdicion y de visita, porque los ar
reglamentos en el tiempo de su visita, pueden esta cedianos son dignidades de las iglesias catedrales, y
blecer lo que les parezca conforme á las sinodales y el edicto de 1606 impone esta obligacion á las digni
costumbres de la diócesis, relativamente á los vasos dades de las catedrales. Segun la disposicion del ar
sagrados, los bancos de las iglesias, el servicio divi— tículo primero, deben ascender al presbiterado den
no y otras materias de semejante naturaleza: pue— tro del año de su pacífica posesion; de lo que se sigue
den tambien, segun la jurisprudencia de los decre que nadie puede ser arcediano no teniendo edad sufi
los, decidir en las cuestiones que no merecen redu ciente para ordenarse de presbítero dentro del año.
cirse á proceso; pero no le es permitido pronunciar Siendo este provisto en su dignidad por especial títu
su juicio en las que pertenecen á un tribunal conten lo, tampoco puede ser despojado de ella segun le
cioso, ni sobre los negocios importantes que no son de parezca al obispo, como los vicarios generales ó pro
la jurisdicion voluntaria, como las dispensas de provisores que solo tienen una simple comision. Para
clamas y licencias de asistir al matrimonio en el privarles de su título se tiene que formar un proceso,
tiempo reconocido inhábil por la Iglesia. Aunque en del cual resulte que ha merecido esta pena por algun
¿ pertenece á los jueces seculares la disciplina delito. Aunque en lo antiguo no hubo mas que un
e las escuelas, puede arcediano, asi como el obis— arcediano en cada iglesia catedral, la estension de
po, preguntar en el círculo de su visita á los maes las diócesis hizo que se dividiesen en muchos arce—
tros y maestras de las escuelas de las aldeas sobre dianatos: por esta razon hay varios arcedianos en la
su porte, y aun destituirlos cuando no esté satisfe— mayor parte de las iglesias de Francia y paises in
cho de su doctrina y de sus costumbres. Asi lo dis mediatos; y en algunas diócesis el arcediano de la
puso el artículo 25 del edicto del mes de abril de 1695. silla episcopal toma el título de arcediano mayor.
Por lo comun no tienen los arcedianos derecho de Cuando el arcediano va de visita le deben recibir con
visitas los monasterios y colegiatas de su arcediana muestras de distincion. Una de las principales es que
to, pero si estuviesen en posesion de visitarlos y ar— salga á recibirle el cura á la puerta de la iglesia; y
reglarlos, deberán conformarse con la práctica. En que á presencia de este se ponga aquel la estola. Asi
 ARC 155 ARC
lo decretó el parlamento de Paris en 26 de junio cofradias establecidas, ó que se establezcan despues
de 1726 para el arcediano de Senlis; y en 28 de ju— con el mismo nombre y con el mismo fin, y el comuni
nio de 173 pronunció lo mismo en favor del arce carlas todas las gracias, favores é indulgencias con
diano de Puisaie, de la iglesia de Auxerre; pero este que ha sido enriquecida la archicofradia matriz. Tales
derecho depende siempre del uso y de la posesion en han sido los progresos de la asociacion de Nuestra
que están. Los arcedianos pueden cobrarse, durante Señora de las Victorias, desde el dia en que se la dió
la visita, el derecho de procuracion, que es por lo esla autorizacion, que los registros de la capital con—
comun de seis, diez ó doce reales diarios, segun las laban ya en el mes de enero de 1842 cerca de 250000
costumbres de las dióceses. Cuando están de visita se asociados; y que en la mayor parte de las diócesis de
les tiene por presentes en el coro, siendo canónigos, Francia y del estranjero existen, cofradias afiliadas, y
y participan de todos los frutos y distribuciones de su la que ápesar de ser tan reciente se encuentra ya ro
beneficio, con tal que dén parte al cabildo de su sa deada de una multitud de hijos. En todas las clases
lida. Asi lo decretó el parlamento de Dijon en 1.º de de la sociedad, los enfermos son asistidos, los incré
junio de 168á instancia del arcediano de Autun. En dulos y los filósofos atraidos á la fé de sus padres, los
algunas diocesis gozan las rentas de los curatos y los jóvenes confiesan sus errores, las mugeres munda
derechos anejos mientras están vacantes ó en litigio. nas cambian de conducta, los militares proclaman que
Se llama este derecho de vacante, ó cuarta canónica; deben su salvacion á Maria, los criminales endureci—
es tan odioso, que el concilio de Basilea quiso abolir dos se confiesau vencidos y arrepentidos. Tales son
le; pero ha prevalecido la costumbre. los resultados obtenidos por la archicofradia, obra
En Paris gozan los arcedianos de lo que se llama bendita, que con la de la propagacion de la fé,
espolio ó derecho de despojo. Sobre este particular cuyo origen se debe tambien á la Francia, nos au
no hay disposicion alguna por derecho civil ni canó— gura un brillante porvenir.
nico; pero tiene en su favor una larga posesion, por
la que se han mantenido en el uso de tómar despues 34 Arcipreste. (Derecho eclesiástico). En la pri
de la muerte de los curas párrocos de la ciudad ó del mitiva Iglesia daban este nombre almas antiguo ógefe
campo, la mejor cama, la ropa ó solana, el ceñidor, de los presbíteros, asi como el de arcediano al prime
la sobrepelliz, la muceta, el breviario y el caballo ó ro de los diáconos aplícase en el dia á un eclesiástico
mula, si los hay; todo esto por razon de su dignidad revestido de una dignidad que goza de varios dere
de arcediano y derecho de funerales. Asi resulta de chos. Se llama arciprestazgo el título y distrito del ar
dos decretos dados el 20 de julio de 168%, y el 18 de cipreste. En los primeros siglos de la Iglesia habia tres
marzo de 1711, en favor del arcediano de Josas. dignidades principales, que lo eran al mismo tiempo
Otros muchos, que se han referido en el primer vo de la iglesia catedral y de la iglesia; á saber: el ur—
lúmen de las Antiguas Memorias del ciero, han de cipreste, que era el principal de los presbíteros y de
cidido que los arcedianatos no ecsijan precisamente los clérigos; el arcediano, que era el principal de los
los grados mayores, porque estaban declarados esen diáconos, y el primiciero, que era el primero de los
tos por el edicio de 1596, pero como este no fue re clérigos que mandaba sobre todo el clero inferior. Se
gistrado en ningun tribunal de justicia, se funda solo hizo referencia de estas tres dignidades en los cáno
en el artículo del edicto de 1606, que declara nes arábigos del concilio de Nicea; y el de Mérida, ce
esentas de la espectativa de los graduados todas las lebrado en 666, manda que cada obispo tenga en su ca
dignidades de las iglesias catedrales. Otra sentencia tedral un arcipreste, un arcediano y un primiciero;
que dió el parlamento de París el 30 de agosto de cuyas funciones no distingue.
1678 en el litigio que hubo entre el señor Millol, cu omo el nombre de presbítero tiene su origen de la
ra, de Pressiñi, por su porcion cóngrua, y el señor edad avanzada en que debian hallarse aquellos que se
del territorio que debia satisfacerla, en calidad de ma honraban con este caracter, el arcipreste, que era el
yor partícipe en diezmos, declaró que los principales primero de los presbíteros, debia, por consiguiente te
partícipes no tenian obligacion de pagar los derechos ner mas edad. Con todo, los obispos dieron algunas
de visita al arcediano, aunque el cura estuviese re veces esla dignidad al mérito, aunque regularmente
ducido á su porcion cóngrua (Estracto del Dicciona no fuese debida sino á los ancianos. Vemos que á Pro
rio de Jurisprudencia). terio, que fue electo obispo de Alejandria, despues de
la deposicion de Dióscoro en el concilio de Calcedo—
* Arehicofradía del Santísimo é luamma nia, le habian hecho arcipreste de la misma iglesia.
eulado corazon de María. Asociacion piado S. Gerónimo parece darnos á entender que en la Igle
sa que en el mes de diciembre de 1836, Mr. Desge sia latina todas las catedrales tenian un arcipreste, sin
neties, cura de la parroquia de Nuestra Señora de las que hubiese mas que uno en cada una. Los arcipres
Victorias en Paris, tuvo la idea de establecer en esla tes habian ocupado en otro tiempo un rango distin—
iglesia á fin de obtener por la proteccion del Santí guido en la Iglesia, por lo que esplicaremos cuáles eran
simo é inmaculado corazon de Maria, la gracia y conº sus funciones, segun las costumbres antiguas, y cuá
version de los pecadores. Habiendo llamado la aten les son segun el derecho canónico actual. En su ori
cion del Papa Gregorio XVI las conversiones pro gen el arcipreste era la primera dignidad despues del
digiosas, fruto de esta asociacion, tanto en París como obispo, y ordinariamente tenia el ¿? de vicario ge
fuera, dió un breve en 1838 erigiendo la asociacion de neral, ademas del gobierno de la iglesia, cuando el
Nuestra Señora de las Victorias en archicofradia, y obispo estaba ausente. El capitularió de Luis el Bue—
concedió á los curas de esta parroquia, á perpetuidad, no, del añode 828, llama á los arciprestes los tenientes
la facultad de agregará ella todas las asociaciones y y coadjutores de los obispos. El concilio de París, ce—
 * ARC 156 ARC
lebrado en 850, dice que los arciprestes estaban en del reino. Varían enteramente sus derechos y su ran
cargados de escitar á la penitencia pública á los que go de una diócesis á otra; de modo que es preciso re
habian cometido crímenes públicos, , y que debian currir á los usos de cada lugar cuando ocurre algun
nombrar, en union con los obispos, á los presbíteros altercado con este motivo. Cuando un arciprestees dig
¿ que oian confesiones de los delitos secretos. nidad, debe ser graduado y tener veinte y dos años
l segundo concilio de Tours, despues de haber dis— para poseerla; y si tiene cargo de almas, à lo menos
puesto el orden y las funciones de los arciprestes, los veinte cumplidos, como para los curatos. (Estracto
condena á hacer penitencia en un monasterio sino hu del diccionario de Jurispaudencia).
biesen vigilado sobre la continencia de los presbíte—
ros, diáconos, y subdiáconos: el mismo ¿? prohi Arco Iris. Lo que se dice de él en la Sagra
be á los obispos el deponerlos sin tomar el consejo deda Escritura es muy ridículo para muchos incrédulos.
todos los presbíteros y abades de las diócesis. PareceDespues del diluvio, Dios dice á Noé y su familia:
que segun la regla de S. Crodegando, obispo de Metz, «De aquí en adelante no habrá un diluvio que asole
eran los ministros universales del obispo para el go— la tierra, y hé aquí la señal de la alianza que hago
bierno espiritual de los legos, de los párrocos y aun con vosotros, ó de la promesa que os hago. Colocaré
de los canónigos; y que una vez nombrados por el mi arco en las nubes, y cuando haya cubierto el cie
obispo, no podia destituirlos mas que en un sínodo, lo de nubes aparecerá mi arco y me acordaré de la
despues de haberles formado su proceso. romesa que hago de conserváros asi como á todos
El concilio de Chalons, celebrado en 650, prohibió os animales». Gén c. 9.y. 11, y sig. 1.” Esto su
á los jueces seculares en continuar la visita que tenian pone, dicen nuestros críticos, que el arco iris noecsis
costumbre de hacer en las parroquias del campo y en iia antes del diluvio, pues que Dios dice, colocaré mi
los monasterios, á menos que fuesen invitados á ello arco en las nubes; es asi que este fenómeno debió apa
por los arciprestes y abades. El concilio de Pont-Au recer siempre que lloviera por una parte, al paso que
demer, celebrado en 1279, recomienda á los arcipres el sol alumbra por otra; luego no es probable que Noé
tes que tengan cuidado de que todo eclesiástico en su su familia no hubiesen jamás visto el arco iris.
distrito lleve la tonsura y trage eclesiástico. Tambien ¿? Es
ridículo el dar por señal la lluvia, para segu
parece que tenia jurisdicion, segun este último con ridad de que no habrá inundacion y de no ahogarse;
cilio, puesto que el cánon 16 les prohibe suspender y ¿ prueba que el autor de esta historia era muy mal
escomulgar sin poner su sentencia por escrito. En el 1SIC0.
dia varian, segun las diferentes diócesis, el número, Respuesta. Esto prueba mas bien que los críticos de
el rango, las funciones y derechos de los arciprestes.
esta historia son muy temerarios. 1."Como los verbos
En París no hay mas que dos, que son el cura de la hebreos no son mas que participios indeterminados,
Magdalena y el de S. Severino. Consisten sus funcio— para traducirlo literalmente era preciso decir: Heme
nes en remitir las órdenes del arzobispo á los curas aqui poniendo mi arco en las nubes y esto significa del
de la ciudad y del distrito: asisten á la consagracion mismo modo. Yo pongo, yo he puesto ó yo pondré.
de los santos óleos el Jueves Santo en la lglesia me 2.º Dejando el ¿ en futuro no se sigue por esto
tropolitana, pero se sientan en el coro bajo. En el sí que el arco iris no habia sido visto antes del diluvio
¿ del arzobispado ocupan el primer sitio al ladoiz sino que no se habia aparecido durante el diluvio y
quierdo con los decanos rurales, y siguen inmedia que iba á aparecer de nuevo. 3.” Con efecto, el arco
tamente al arzobispo en las procesiones al lado de los iris no puede tener lugar cuando las nubes son muy
vicarios generales. espesas y están cargadas de mucha agua, como de
En Tours hay cinco arciprestes. El primero, que bió suceder durante el diluvio; no puede verse sino
tiene el título de arcipreste mayor, es una dignidad de cuando las nubes son bastante ligeras é interrumpi
la catedral que tiene asiento mas arriba que los canó das para que el sol pueda introducir sus rayos al tra
nigos, y les precede en las procesiones; tiene una vés. Luego siempre que se manifieste el arco iris, se
renta fija ademas de la accidental, que es igual á los rá un signo cierto de que no caerá bastante lluvia pa
otros. Estos van en las procesiones despues de los ra causar una inundacion general; estaseñal era pues,
canónigos prebendados. En Orleans solo hay un arci muy apropósito para asegurar á Noé y á sus hijos
preste, que es una de las dignidades del cabildo; pe contra el temor de un nuevo diluvio.
ro no ejerce funcion alguna. Goza del derecho de to El término de alianza, de que se sirve el escritor
mar en la demarcacion de su gran arciprestazgo la sagrado, ha alterado tambien la bilis de un filósofo.
cama de los curas despues de su muerte. Se valúa es «En qué consiste, pues, dice, esa alianza que Dios ha
te derecho en cincuenta libras para los curatos donde hecho con el hombre y con los animales? Qué condi
hay vicario, y en veinte y cinco para los que no lo ciones han sido las del tratado? Que todos los anima
tienen. Tiene ademas la tercera parte de las vacan les se devorarian unos á otros, que se alimentarian
tes en la estension de su arciprestazgo; las otras dos de nuestra sangre y nosotros de la suya, que despues
terceras partes pertenecen al dean como arcediano de comerlos nos esterminaríamos con rábia... Si hu
mayor. En otras diócesis los arciprestes tienen los mis biera habido alguna vez un pacto semejante hubiera
mos derechos sobre los párrocos de la ciudad que los sido hecho con el diablo».
decanos rurales sobre los curas del campo. En la igle El ridículo de este retazo es llevado al esceso; no
sia metropolitana de Reims los arciprestes son unos sabia este filósofo que en hebreo alianza y promesa se
vicarios de los canónigos, ofician en su lugar, y ento espresan con el mismo término? Con efecto, qué es
nan las horas menores. Seria difuso el hablar de las una alianza, sino una promesa recíproca? Toda pro
Aunciones de los arciprestes en las diferentes diócesis mesa lleva en sí la obligacion de fidelidad por una
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arte, de confianza y obediencia por otra. Ahora dimiento humano, no se encuentran ya envuelas las
ien, Dios promete no asolar la tierra, y no estermi objeciones de los filósofos acerca de la Trinidad, la
nar la raza de los hombres ni de los animales por un presciencia de Dios y la espiritualidad del alma: en las
diluvio universal; dice: «En tanto que dure la tierra, proposiciones sobre la voluntad, las opiniones de Lu
la sementera y la cosecha, el calor y el frio, el estío tero y las sutilezas de los jansenistas sobre la gracia,
y el invierno, el dia y la noche se sucederán cons la libertad y la predestinacion; en las proposiciones
tantemente. Gén. c. 8, y. 22. Esta promesa, pues, de sobre el mando, los errores de la astrologia judicia—
bia empeñará Noé á cultivar la tierra y alimentar los ria; y la mania de conocer el porvenir por tantos
animales sin temor de ver frustrado el fruto de sus medios ridículos; por último, en las proposiciones so
trabajos. bre la filosofia y la teologia, las causas de la oposicion
Aunque los animales feroces y carnívoros devoran ue se ha creido ver, y que muchas personas creen to
á los demas, y apesar de que los hombres destruyen davia ver entre la naturaleza y la gracia, la razon y
muchos para alimentarse, no obstante las especies la fé, la ley natural y la ley revelada, la filosofia y
útiles no dejan de conservarse y multiplicarse: Dios la teologia.» -

les ha dado una fecundidad relativa al consumo que «Despues de estas investigaciones será preciso ec
se hace de ellos. Apesar de las irregularidades pasa saminar tambien, sino quedan en el dia algunos restos
geras de las estaciones, las tempestades, y las este de aquellos errores aristotélicos en nuestros libros de
rilidades, la tierra continua desde el diluvio suminis enseñanza elemental; porque hay que tener presente
trando la subsistencia á sus habitantes por numero ue la autoridad de Aristóteles ha sido repudiada en
sos que sean; las hambres no son mas que locales y sica ,, en medicina, en astronomía y en la mayor
pasageras. A medida que aumenta la poblacion se en parte de las demas ciencias: no han quedado vesti
cuentra el medio de hacer fértiles terrenos que pare— gios mas que en la enseñanza de la filosofia.
cian incapaces de dar ningun producto, etc. Todos es «Creemos que sea mas importante examinar esta
los fenómenos son bastante interesantes para llamar cuestion, porque siempre que el error se encuentre
la atencion de los filósofos y suficientemente maravi en las inteligencias, en la enseñanza es en donde debe
llosos para que el autor sagrado haya tenido razon de buscarse su causa.»
¿? la bendicion de Dios. Gén. c. 9, y. 1.
Armas. No es verdad, como se han adelantado á
Arcóntico, adjetivo, palabra tomada del grie— decir algunos críticos del cristianismo, que le esté pro
go ARCON en plural ARCoNTEs, principados ó gerar— hibido á un cristiano el llevar ¿ Lucas en su
quías de ángeles. Se dá este nombre á una secta de Evangelio refiere la leccion que dió S. Juan Bautista á
hereges que aparecieron á fines del siglo segundo, por los soldados «no maltrates à nadie injustamente;
¿ la creacion del mundo, no á Dios, sino contentaos con vuestro sueldo. Luc., c. 3.» No les
diversas potestades ó principados, es decir, á inteli. mandó dejar las armas. Cuando Jesucristo alabó la fé
gencias subordinadas á Dios y que llamaban arcon— del centurion y le concedió un milagro, no le vituperó
tes. Rechazaban el bautismo y los santos misterios de su profesion. Mat., c. 7, y. 10, 13. S. Pablo quiere
los que hacian autor á Sabaholh que era, segun ellos, que cada uno permanezca en el mismo estado de vida
uno de los principados inferiores. Al oirlos, la muger en que fue llamado á la fé, sin esceptuará los soldados.
era la obra de Satanás, y el alma debia resucitar con l. Cor., c. 7, y. 20. Tertulianoasegura queen su tiem
el cuerpo. Se les considera como una rama de la secta p0 los campos y los ejércitos estaban llenos de cristia
de los valentinianos ó de los marcosianos. Tillemont, nos, y que eran buenos soldados porque no temian la
t. 2, p. 295. muerte. Apol., c. 37, y 2. Si en su tratado de la ido—
latria y en el de la corona decide que un cristiano no
Arcopagíta. V. S. DIONIsio. debe abrazar el estado militar, es porque entonces se
exigia que un soldado jurase por los dioses del im—
* Aristotélicos. Se dá este nombre á los que perio, y rindiese un culto á las banderas militares
bebieron en las fuentes de los principios y doctrina salpicadas con las imágenes de los dioses: en este sen -
de Aristóteles algunos errores, que el obispo de Pa tido, dice que nada de comun tienen el signo de Jesu
rís, Esteban Tempier, censuró el 7 de marzo de 1277. cristo y las insignias del diablo, de idol, c. 19; que un
Las proposiciones censuradas por el prelado demues cristiano no debe velar durante la noche guardando
tran cuánto oscurecieron la admirable luz que el losdiosesde que ha renunciado. De Corona, c.9. Cuan
Evangelio nos habia suaministrade acerca de Dios, del do no existia este eligro, el tercer cánon del con
alma, de la voluntad, del mundo, de la sabiduria cilio de Arles ¿ escomulgar á los que deser—
y de la moral, la introducion de los métodos paga tasen aun durante la paz. Constantino reinaba enton
nos en la enseñanza cristiana. Estos errores contienen ces; no se tendian lazos á los soldados cristianos para
el germen, son el origen y la principal causa de todos obligarlos á hacer traicion á su religion. El horror á
los de los siglos subsiguientes; porque la sentencia de la profesion militar es un error de los cuakeros re—
condenacion del obispo de París no tuvo por resulta futado por Belarmino, t. 11. Controv. de Laicis.
do el desterrar las obras de Aristóteles de la enseñan
za pública y particular. Armenios, considerados con relacion á su reli
«Es útil, dice Bonneti, el recomendará los que quie gion, son una secta de cristianos de Oriente llamados
ran conocer las causas y seguir la filiacion de los er asi porque habitaban en otro tiempo en la Armenia.
rores que han despedazado la Iglesia, el que estudien Se cree que el primero llevó alli la fé fue el
sien las proposiciones sobre Dios, el alma y el enten apóstol S. Bartolomé; pero a tradicion comun de los
TOMO I. 26
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armenios es que la mayor pai te de su pais fue con destruyó bajando á los limbos, y que la privacion de
vertida á principios del siglo cuarto por S. Gregorio, Dios será el suplicio de los reprobados; que la estre
por sobrenombre el Iluminador. Lo que hay de ver ma—uncion no la administran hace cerca de doscien—
dad es, que á principios del siglo IV, la Iglesia de los años, porque el pueblo, creyendo que este sacra
Armenia era muy floreciente, y que el arrianismo mento tenia la virtud de remitir por sí solo todos los
hizo en ella muy pocos estragos. Mas el año 535, la pecados, habia tomado de aqui motivo para descuidar
mayor parte de esta lglesia abrazó los errores y el cis de lal suerte la confesion, que insensiblemente hubie
ma de los jacobitas ó monofisitas. Los armenios perte ra sido abolida de todo punto; que aunque no reconoz
necian al patriarca de Constantinopla; se separaron can el primado del papa, le llaman, no obstante en
de él antes de la época de Focio, lo mismo que los grie sus libros el pastor universal y vicario de Jesucristo;
gos de ese pais, y compusieron una Iglesia nacional, ¿ están de acuerdo con los griegos sobre el artículo
unida en parte á la Iglesia romana, y en parte sepa e la Eucaristia, escepto que no mezclan el agua con
rada, porque los hay de dos clases, los francos arme el vino en el sacrificio de la misa, y que usan en ella
nios y los cismáticos. Los francos armenios son cató pan sin levadura para la consagracion como los ca—
licos y obedecen á la Iglesia romana. Tienen un pa tólicos.
triarca en Naksivan, ciudad de Armenia, bajo la domi Pero parece que Galano y Lefevre atribuyen á los
nacion del rey de Persia, y otro en Kaminiek, en Po— armenios cismáticos errores de los cuales no son cul—
lonia. Su liturgia fue impresa en Roma en su antigua ables, ó al menos que no son comunes entre ellos.
lengua, y hay una traduccion latina que el P. Le P. Lebrun, antes de referir, su liturgia, prueba
brun ha dado con notas. Esplic. de las ceremonias que á escepcion de la heregia de los monofisitas, no
de la Misa, t. 5, 10.” disertacion. Los armenios cis se les puede imputar ninguna opinion absolutamente
máticos tienen tambien dos patriarcas: el uno residen contraria á la creencia de la Iglesia católica; que están
te en el convento de Ecmiacin, es decir, las tres igle de acuerdo con nosotros sobre el número y naturaleza
sias próximas á Erivan, y el otro en Cis, en Cilicia ó de los sacramentos, sobre la presencia real de Jesu
Caramania. cristo en la Eucaristia, sobre la transubstanciacion en
Desde la conquista de su pais por Scha—Abbas, rey el sacrificio de la misa, el culto de los santos, el orar
de Persia, casi nunca han formado nacion ó han teni por los difuntos, etc. En vano han tratado los protes
do habitacion fija; se han dispersado por algunas par— tantes de encontrar entre ellos sus propios errores, no
tes de Europa, particularmente en Polonia. Su princi han podido hallar ningun vestigio. Sin embargo, los
palocupación es el comercio, que entienden muy bien. armenios cismáticos se encuentran separados de la
El cardenal de Richelieu, que trataba de restablecerle Iglesia romana hace mas de mil y doscientos años.
en Francia, proyectó el traerá ella gran número de Brerelvood les ha acusado sin fundamento el favo
armenios; y el canciller Seguier les concedió una im recer las opiniones de los sacramentarios y no comer
prenta en Marsella para que mutiplicasen con menos los animales conceptuados inmundos en la ley de Moi
gastos sus libros de religion, que antes de esta época sés; sin tener en cuenta la costumbre de todas las
eran muy raros y caros. - sociedades cristianas de Oriente, que era no comer
Se ha conservado entre ellos el cristianismo, pero sangre ni carnes sofocadas, en lo cual segun el espíri
con mucha alteracion entre los armenios cismáticos. tu de la primitiva Iglesia no hay supersticion. Hay
El P. Galano refiere que Juan Hermac, armenio ca grandes ayunadores, que si los oimos, creen que lo
tólico, asegura que siguen la heregia de Eutyques, esencial de la religion consiste en ayunar.
respecto á la unidad de naturaleza en Jesucristo; que Se encuentran entre ellos muchos monasterios de
creen que el Espíritu Santo no procede mas que del la órden de S, Basilio, cuya regla observan los cis
Padre: que las almas de los justos no entran en el máticos; pero los que están reunidos á la Iglesia ro
Paraiso, ni las de los condenados en el infierno antes mana abrazaron la de santo Domingo, desde que los
del juicio final; que niegan el purgatorio; que separan dominicos enviados á la Armenia por Juan XXiI, con
del número de los sacramentos la confirmacien y la tribuyeron mucho para unirlos á la Santa Sede. Esta
estrema—uncion; conceden al pueblo la comunion bajo union ha sido rota y renovada muchas veces, sobre
las dos especies; la dan á los niños antes de que tengan todo en el concilio de Florencia bajo el pontificado de
uso de razon; y por último, piensan que todo sacerdote Eugenio IV.
puede absolverindiferentemente toda clase de peca Los armenios rezan el oficio eclesiástico en la anti
dos; de manera, que no hay casos reservados ni para gua lengua armenia, diferente de la del dia y que el
los obispos ni para el Papa. Miguel Lefevre, en su ueblo no entiende. Tienen en la misma lengua toda
Teatro de la Turquia, dice, que los armenios son mo a Biblia traducida segun la version de los Setenta. Los
nofisitas, es decir, que no admiten en Jesucristo mas que están sujetos al papa rezan tambien el oficio en
que una naturaleza, compuesta de la naturaleza di— esta lengua, y tienen la misma creencia que la Igle—
vina y de la humana, sin que por esto se mezclen. El sia católica, sin ninguna mezcla de los errores que
mismo autor añade, que los armenios, rechazando el profesan los cismáticos.
purgatorio, no dejan de orar y celebrar misas por los Tambien haremos notar que el título de vertabied
difuntos, cuyas almas creen que esperan el dia del ó doctor, es mas respetado por los armenios que el de
juicio en un lugar en donde los justos esperimentan obispo; le confieren con las mismas ceremonias que
sentimientos de alegria con la esperanza de la eterna se dán las órdenes sagradas, porque segun ellos, esta
felicidad, y los malos impresiones de dolor, temiendo dignidad representa la de Jesucristo, que se llamaba
los suplicios que conocen haber merecido; que otros rabbi o doctor. Estos vertabiedos tienen el derecho de
piensan que no hay infierno desde que Jesucristo lo predicar sentados, y de llevar una cruz semejante á
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la del patriarca, al paso que los obispos tienen una de to, por el cual haya resuelto dar á Jesucristo á solo
menos distincion y predican de pie; la ignorancia de los elegidos, ni el dará ellos únicamente, por medio
sus obispos ha procurado estos honores á los doctores. de una vocacion eficaz, la fé, la justificacion, la
Galano, Conciliacion de la Iglesia armenia con la Igle perseverancia y la gloria; sino que ha dado á Jesu
sia romana; Simon, Historia de las religiones de cristo por redentor comun á todo el mundo, y re—
Levante. suelto por este decreto el justificar y salvar á todos
los que crean en él, y al mismo tiempo darles á todos
Armian anismo, doctrina de Arminio, céle los medios suficientes para salvarse; que ninguno
bre ministro de Amsterdam y despues profesor en teo-. perece por no tener estos medios, sino por abusar de
logia de la academia de Leyde y de los arminianos ellos; que la eleccion absoluta y precisa de los parti—
sus sectarios. Calvino, Beza, Zanquio, etc., habian es culares se hace en vista de su fé y de su perseve—
tablecido dogmas demasiado severos sobre el libre al rancia futura; que no existe mas que eleccion con—
bedrío, la predestinacion, la justificacion, la perse dicional; que la reprobacion se verifica del mismo
verancia y la gracia; los arminianos tuvieron sobre es modo, en vista de la infidelidad y de la perseveran
los puntos opiniones mas moderadas y aproximadas cia en el mal.» Este sistema estaba en oposicion di
bajo algunos aspectos á las de la Iglesia romana. Go recta, tanto con el de los supralapsarios, como con el
mar; profesor de teologia en la academia de Grouineja, de los infralapsarios.
y calvinista rígido, se levantó contra la doctrina de Acerca de la universalidad de la redencion, ense
Arminio, despues de muchas disputas que tuvieron ñaban los arminianos, «que el precio pagado por el
principio en 1609, amenazando encender la guerra Hijo de Dios no solo es suficiente para todos, sino ac—
civil en las provincias unidas: se discutió la materia y tualmente ofrecido para todos d cada uno ; que nin
se decidió á favor de los gomaristas, por el sínodo de guno está escluido del fruto de la redencion por un
Dordrecht, celebrado en 1618 y 1619. Ademas de los decreto absoluto ni de otro modo que por su culpa.»
teólogos de Holanda, asistieron á este sínodo diputa Doctrina del todo diferente de la de Calvino y de los
dos de todas las iglesias reformadas, esceptuando fran gomaristas, que establecen como dogma indudable
ceses, que se lo impidieron por razones de estado. que Jesucristo no ha muerto en sentido alguno, sino
Para comprender bien el estado de la cuestion que por los predestinados, y de ninguna manera por los
¿ decidir, es preciso saber que los teólogos réprobos.
Acerca de los puntos tercero y cuarto, despues de
adheridos á las opiniones de Calvino sobre la predes
tinacion, no estaban de acuerdo: los unos soste haber dicho que la gracia es necesaria para todo bien,
nian, como su maestro, que Dios ab alterno y aun no solo para acabarle, sino tambien para comenzarle,
antes de prever el pecado de Adan, habia ¿º añadian que la gracia no es irresistible, es decir, que
nado una parte del género humano á la felicidadeter se puede resistir á ella; sostenian que aunque la
na, y otra parte á los tormentos del infierno; que por gracia sea dada desigualmente, «Dios dá ú ofrece
consiguiente Dios tenia resuelto de tal modo la caida una suficiente á todos aquellos á quienes ha sido
de Adan, y habia preparado de tal suerte los aconte anunciado el Evangelio, aun á los que no se convier
cimientos, que nuestros primeros padres no podian tan, y la ofrece con un deseo sincero y formal de sal
abstenerse de pecar. Estos teólogos fueron llamados var á todos. Es indigno de Dios, decian, el aparentar
supralapsarios, porque suponian una predestinacion querer salvar, y en el fondo no quererlo; el inducir
y una reprobacion absolutas antelapsum ó supralap secretamente á los hombres á los pecados que prohi
sºm; opinion horrible, que pinta á Dios como el be públicamente:» dos opiniones monstruosas que
mas injusto y cruel de todos los tiranos. Otros decian introdujeron los primeros reformadores. Acerca del
que Dios no predeterminó positivamente la caida de quinto, es decir, sobre la perseverancia, decian,
Adan, que solo la permitió; que por esta caida, ha «que Dios da á los verdaderos fieles regenerados por
biéndose convertido todo el género humano en una su gracia medios para conservarse en este estado;
masa de perdicion y condenacion, resolvió Dios sacar que pueden perder la verdadera fé justificante, é in
un cierto número de hombres y conducirlos por sus currir en pecados incompatibles con la justificacion:
gracias al reino eterno, al ¿ que deja á los demas aun en los crímenes atroces perseverar y morir en
en esta masa y les rehusa las gracias necesarias para ellos, levantarse de ellos por la penitencia, y sin que
salvarse. Asi, segun estos teólogos, la predestina no obstante la gracia les obligue á hacerlo.» Con es
cion y la reprobacion se verifican supralapsumó infra la opinion destruian la de los calvinistas rígidos: á
lapsum, y por esto fueron llamados supralapsarios ó saber, que el hombre, una vez justificado, no puede
infralapsarios. Véase esta palabra. Estos dos partidosperder la gracia, ni total ni finalmente, es decir, ni
se reunieron bajo el nombre de gomaristas para con absolutamente por cierto tiempo, ni para siempre, y
denar á los arminianos. sin que vuelva. Los arminianos han sido llamados
La disputa, por entonces, se reducia á cinco pun tambien remontrantes, por una demanda ó represen
tos principales: el primero era relativo á la predes lacion que dirigieron á los estados generales de las
tinacion; el segundo ¿ universalidad de la redencion, provincias unidas en 1611, y en la cual espusieron
el tercero y el cuarto, que siempre se trataban a la los pricipales artículos de su creencia.
vez, correspondian á la corrupcíon del hombre y su Sus cinco artículos de doctrina fueron solemne
conversion; el quinto era concerniente á la perseve mente condenados por el sínodo de Dordrecht; se les
rancia. -

privó de sus plazas de ministros y de sus cátedras; y

Sobre la predestinacion decian los arminianos: «que se decidió que en adelante ninguno fuera admitido á
no se debe reconocer en Dios ningun derecho absolu la funcion de enseñar sin haber suscrito á esla con
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denacion. Los gomaristas supralapsarios hicieron los tracion del Estado; al principio fueron perseguidos
mayores esfuerzos para que se aprobara por el sí vivamente por el príncipe Mauricio; pero despues los
nodo su opinion, con respecto á la predestinacion; dejaron en paz, sin admitirlos al ministerio, ni á las
ero no lo pudieron conseguir: los teólogos ingleses y cátedras de teologia, á menos que no aceptasen las
otros se opusieron á ello; asi es que la doctrina es actas del sínodo de Dordrecht. Ademas de Simon
tablecida en Dordrecht es la de los infralapsarios. Episcópio, los mas célebres entre estos úttimos fueron
Mosheim, Hist. ecles., siglo XVII, secc. 2.ºp. 2, c. 2, Estevan de Courcelles y Felipe de Limborch, que es
S. 11. Los decretos de la asamblea de Dordrecht fue cribieron mucho para esponer y sostener las opinio
ron recibidos y adoptados por los calvinistas de Fran nes de su partido.
cia en un sínodo nacional celebrado en Charenton El célebre Juan Le Clerc la abrazó tambien. Es
en 1623; veremos pronto cuáles fueron sus resul muy dudoso, dice Mosheim, si la victoria obtenida
tados. sobre los arminianos por los gomaristas fue ventajosa
Desde su condenacion, los arminianos llevaron su para la Iglesia reformada en general. Por lo que res
sistema mucho mas allá de lo que lo habia hecho el pecta á nosotros, nos parece que ha cubierto la pre
mismo Arminio; cayeron en el pelagianismo, y se tendida reforma de un oprobio eterno. 1.º. Despues
aproximaron mucho á los socinianos, principalmente de haber establecido como máxima fundamental
cuando tuvieron por gefe á Simon Episcópio. Cuan— de esta reforma que la Sagrada Escritura es la sola
do los calvinistas les acusan de renovar una antigua regla de fé, el único juez en las disputas en materia de
heregia condenada ya en los pelagianos y en los se doctrina, era muy absurdo el juzgar y condenar á los
mipelagianos, replican que la simple autoridad de los arminianos, no por el texto ¿? de la Escritura Santa,
hombres no puede pasar por una prueba legítima sino por las glosas, los comentarios y esplicaciones
mas que en la lglesia romana; que los calvinistas que plugo darlas á los gomaristas. Cuando se echa una
mismos introdugeron en la religión otra manera de ojeada sobre los pasages alegados por estos últimos
decidir las diferencias; que no basta el hacer ver en el sínodo de Dordrecht, vemos que apenas hay uno
que una opinion ha sido condenada, sino que es pre solo á cuya letra no añadiesen alguna cosa, d que la
ciso demostrar que está condenada con justicia. Fun mayor parte pueden tener un sentido muy diferente
dados en este principio, que no estan en estado de del que le dan los gomaristas. Los arminianos les ale
refutar los calvinistas, los arminianos suprimian bas gan por su parte, á los que no contestan sus adver—.
tante número de artículos de religion á que los pri sarios; ¿con qué cara puéde decirse que la Escritura
meros llaman fundamentales, porque no se encuen— Santa es la que decide la contienda, cuando se dis
tran suficientemente esplicados en la Escritura. Des puta, sobre su mismo fondo?
echan con desprecio los catecismos y las confesiones 2.º. Apenas puede contenerse la indignacion,
de fé á que quieren atenerse los calvinistas. Por eso cuando se ve que el sínodo de Dordrecht se funda so
estos en el sínodo de Dordrecht influyeron mucho pa bre la promesa que Jesucristo hizo á su lglesia de es—
ra que se estableciera la necesidad de decidir las di tar con ella hasta la consumacion de los siglos, mien
ferencias de religion por via de autoridad, volviendo tras que todos los protestantes hacen profesion de
de esta manera á los principios de los católicos, con creer que este divino Salvador ha abandonado esta
tra los cuales declamaron tanto. Los arminianos fue misma Iglesia inmediatamente despues de la muerte
ron desde luego proscriptos en Holanda, en donde se de los apóstoles; que por espacio de mil y quinien
les tolera no obstante en el dia. tos años dejó introducir los errores mas monstruosos
Han abandonado la doctrina de su primer maes y las supersticiones mas groseras, de manera que
tro sobre la predestinacion y la eleccion hechas ab esta Iglesia no era ya la esposa de Jesucristo, sino la
aeterno, en consecuencia de la prevision de los mé prostituida de Babilonia, de la cual ha sido indispen
ritos; Episcópio ha inventado que Dios no elige á sable separarse en el siglo XVI para poder sal
los fieles sino en tiempo y cuando creen actualmente. varse... ¿Qué pensar todavia cuando se ve á los doc
Juzgan que la doctrina de la Trinidad no es necesa tores de Dordrecht recordar el ejemplo y método de
ria para salvarse, y que no existe en la Escritura los antiguos concilios para condenar los errores, y
ningun precepto que nos mande adorar al Espíritu sobre todo cuando se recuerdan las declamaciones
Santo. Por último, su gran principio es que se deben fogosas que los protestantes se han permitido contra
tolerar todas las sectas cristianas; porque dicen, que todos los concilios? Para colmo de ridículo, citan la
hasta ahora no se ha decidido nada acerca de qnién conducta de los príncipes y de los soberanos que pro
entre los cristianos son los que han abrazado la tegieron la Iglesia contra los ataques de los hereges,
religion mas verdadera y la mas conforme á la pa despues de haber censurado cien veces á los empera
la ha de Dios. -
dores que se mezclaron en disputas de religion; feli
Se dividieron los arminianos en dos ramas, con citan á la Iglesia belga por haberse librado de la tira
relacion al gobierno y relativamente á la religion. nia del antecristo romano, y de la horrible idolatria
Los primeros se llamaron arminianos políticos, y se del papismo, al paso que ellos mismos ejercen contra
comprendió bajo este nombre todos los holandeses sus hermanos uno de los principales actos de esta pre
que se opusieron en alguna manera á los designios tendida tirania, haciéndose jueces y árbitros de la
del príncipe de Orange, tales como MM. Barne— creencia, etc.
welt, Witi y otros muchos reformados, que fueron 3.º, Tampoco los arminianos dejaron de hacer á
víctimas de su celo por su patria. Los arminianos sus adversarios todas las acusaciones que los protes
eclesiásticos son aquellos que, profesando las opiniones tantes hicieron contra el concilio de Trento que los
de los remontrantes no tienen parte en la adminis ha condenado. Dijeron que los que se arrogaban el
 ARMí . 161) ARN
derecho de juzgarlos, eran acusadores y partes; que Arnnonía. V. coNcoRDIA.
un sínodo debia ser libre; que los acusados débían
ser admitidos en él para defenderse y justificarse; que Armonía de la razon y de la ré. V. ré,
sus
bra pretendidos jueces se hacian árbitros de la pala
de Dios, etc. No se han tomado en consideracion
RAZON,

n sus quejas ni sus clamores. Está averiguado en el Arnaldstas ó Arnodistas, hereges llama
dia, que el sínodo de Dordrech, no fue otra cosa mas dos asi de Arnaldo de Brescia, su gefe. Aparecieron en
e una farsa políticajugada por el príncipe Mauricio el siglo Xll; criticaron altamente la posesion de los
e Nassau, príncipe de Orange, para deshacerse de bienes eclesiásticos que la tenian por una usurpacion.
algunos republicanos que le hacian sombra. Véase No admitian el bautismo de los niños, el sacrificio de
GOMARISTAS,
la misa, la oracion por los difuntos, el culto de la cruz,
... º Mosheim nos hace notar que los decretos de etc. Fueron condenados en el concilio de Letran en
Dordrechl, lejos de destruir la doctrina de Arminio el pontificado de Inocencio ll en 1139. Arnaldo, des
la estendieron mas é indispusieron los ánimos contra ues de haber escitado alborolos en Brescia y Roma,
las opiniones rígidas de Calvino. Los arminianos, ahorcado y quemado en esta última ciudad en
dice, atacaron á sus adversarios con tanto espíritu, 1153, y sus cenizas fueron arrojadas al Tiber. Algu
valor y elocuencia, que una multitud de gentes se nos de sus discípulos, que se llamaban tambien pu
persuadió de la justicia de su causa. Cuatro provin blicanos ó poplicanos, pasaron de Francia á lnglater
cias de Holanda rehusaron proscribir al sínodo de ra hácia el año 1166, en donde fueron detenidos y
Dordrecht; este sínodo fue recibido en Inglaterra con dispersados. Esta secla se hizo despues una rama de
desprecio, porque los anglicanos manifiestan mucho la heregia de los albigenses.
respeto hácia aquellos antiguos Padres, que no se han Mosheim, apologista declarado de todos los hereges,
atrevido á poner límites á la misericordia divina. En dice que Arnaldo de Brescia era un hombre de una
las iglesias de Brandeburgo, de Brema y aun en Gi erudicion inmensa y de una austeridad admirable,
nebra, prevalecióel arminianismo. Mosheim añade que pero de un caracter turbulento é impetuoso; que pa—
los calvinistas de Francia se acercaron tambien á fin rece que no adoptó ninguna doctrina incompatible
de no dar demasiada ventaja á los teólogos católicos con el espíritu de la verdadera religion; que los prin
contra ellos; pero olvida la aceptacion formal de los cipios que le hicieron obrar no fueron reprensibles si
decretos de Dordrecht hecha en el sínodo de Charen no porque los exageró mucho y los puso en práctica
ton en 1623.0 esta aceptacion no fue sincera, ólos con un grado de vehemencia tan criminal como im
calvinistas se han avergonzado despues de la ceguedad prudente; que por último, fue víctima de la venganza
de sus doctores. de sus enemigos, que fue crucificado y arrojado al
No concluiríamos si siguiéramos enumerando to fuego el año 1155. Hist ecles. del siglo XII, 2." parte,
dos los absurdos, errores y rasgos de doblez y de c. 5, S. 10.
pasion que se notan en estos mismos decretos. Se en
cuentran en la coleccion de las confesiones de fé de
¿ ha olvidado, sin duda, ¿ Arnaldo de
Brescia era monge y discípulo de Abelardo, y que no
las iglesias protestantes. Bossuet, Hist. de las varia— dejó ninguna obra que probase su erudicion, ni era
ciones, lib. 1, S. 23, etc. de suponer la tuviese despues de haber pintado á to
Los luteranos, asi como los anglicanos, no han podi dos los monges de aquel tiempo como unos ignoran
do disimularse que la censura dada en Dordrecht con tes. Condenaba el bautismo de los niños, el sacrifi
tra el arminianismo recaia directamente sobre ellos. cio de la misa, etc. Queria que se despojara á los ecle—
Mosheim hizo una disertacion en la cual prueba: siásticos de los bienes que poseian legítimamente, y
1.” Que los cinco artículos de la doctrina condena— escitó sediciones. En esto reconocemos los principios
dos por este sínodo, son el sentir comun de los lu y el espíritu de los pretendidos reformadores; ¿pero
ieranos y de la mayor parte de los teólogos anglica es compatible con el espíritu de la verdadera religion,
nos. 2."Que el sínodo, lejos de condenar la conducta que prohibe alterar el orden público, y sobre todo, á
abominable de Calvino, que representa á Dios como un fraile sin autoridad? Le huhiera agradado á Mos
autor del pecado, mas bien la ha adoptado y confir heim que un celoso por la pobreza evangélica le hu
mado. 3."Que los decretos de Dordrecht fueron es— biera quitado las dos abadías que poseia? Arnaldo de
presamente concebidos en términos ambiguos para Brescia no fue víctima de la venganza de sus enemi
dejar facultad de entenderlas al capricho...º Réfuta gos, sino justamente castigado como sedicioso y per
los sofismas y subterfugios por medio de los cuales turbador del orden público; no fue crucificado, sino
muchos teólogos calvinistas quisieron probar que la alado á un poste, ahorcado y quemado.
censura de este sínodo no interesaba á los luleranos.
5.” Demuestra el ridículo de los elogios exagerados Arnaldo de Villanueva. Es preciso no
que han hecho de esta asamblea y de sus decretos, y confundirle con el anterior. Este fue un químico y
el oprobio de que se han cubierto los calvinistas usan médico célebre que practicó y enseñó su arte con mu
do de violencia contra los arminianos, por conside cha reputacion en España y Paris á principios del si
rarlos como herejes. 6.º Concluye diciendo que esta lo XIV. Desgraciadamente quiso meterse, á teó
conducta es el mayor obstáculo que los calvinistas pu ogo. Enseñó en sus libros que en Jesucristo, la natu
dieron oponer para su reunion con los demas protes ¿a humana es igual en todo á la divinidad; y
tantes, y el medio mas seguro que pudieron hallar supo todo lo que sabia la divinidad; que el demonio
para hacer eterna su division. De auctoritate concilii hizo perecer la fé; que Dios no ha amenazado con la
Dordra. paci saera noacia, in ..." Helmstad, 1726. condenacion eterna á los que pecan, sino solo á los
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que dan mal ejemplo; que el mundo debia concluir Arrianismo, Arrianos. Arrio, sacerdote
el año de 1335, etc. Quince proposiciones estractadas de Alejandria, primer autor de la heregia, á la cual
de sus obras fueron condenadas despues de su muer dió nombre, comenzóá publicarla el año 319. Descon
te por la inquisicion de Tarragona, porque tenian al— tento con una esplicacion que Alejandro su obispo ha
gunos sectarios en España. Pero no es cierto que este bia dado del misterio de la Santísima Trinidad en una
autor haya sido del número de los que se libraron reunion de sacerdotes, sostuvo que el Hijo de Dios ó
con trabajo de la mano del verdugo, como dice Mos el Verbo divino, era una criatura sacada de la nada
heim, siglo XIII, segunda parte, c. 1; S. 9.. Arnal que Dios Padre habia producido antes de todos los si,
do de Villanueva murió en el buque que le transpor glos, y de la cual se habia servido para crear el mun
taba á Italia á donde habia sido "¿ para lratar do; que el Hijo de Dios era de una naturaleza y de una
con el papa Clemente V. Véase el Dicc. de las heregias dignidad muy inferior á la del Padre; que no se lla:
por Pluquet, que cita sus pruebas. maba Dios sino en un sentido im ¿ Condenado al
principio por su obispo en un concilio de Alejandria,
Arnobio, profesor de retórica en Sicca, en Afri y en otro segundo celebrado el año 321, se retiró á la
ca; se convirtió al cristianismo durante la persecucion Palestina y escribió á los mas célebres que
de Diocleciano, ¿ á principios del siglo IV. ¿
del rigor con que se le trataba, y supo dis
Tuvo por discípulo á Lactancio. Despues de su con razar su doctrina y hacer odiosa la de Alejandro, co
version escribió en siete libros una obra contra los mo tambien su conducla; se hizo de esta suerte mu—
gentiles, en la que hace la apologia de la religion cris
chos partidarios, principalmente á Eusebio de Nico
tiana, refuta la doctrina de los paganos. Como no media, cuyo crédito era grande en aquella época,
estaba bien instruido en nuestros dogmas, se le acusa tanto en la Iglesia como en la corte. Alejandro por
de haber incurrido en algunas equivocaciones; pero su parte publicó los errores de Arrio y las causas de
el P. Le Nourry y Dom Cellier le han justificado su condenacion; y desde entonces empezó á acalorar
acerca de muchos ártículos. La mejor edicion de esta se la disputa por una y otra parte.
obra es la de Amsterdam en 1651, en l.º 1. El emperador Constantino que previó las con—
Barbeyrac, Tratado de la moral de los Padres, secuencias de esto, trató, aunque en vano, de conci
c., S.3, nota, acusa áArnobio de haber enseñado liar ó calmar los dos partidos é imponerles silencio.
que Dios no es el Criador de los insectos ni de las al— Viendo no podia conseguirlo, reunió, el año 325,
mas humanas; pero despues de una lectura reflexiva un concilio general en Nicea, en la Bitinia, en el que
nos parece que lo que ha querido decir es que, si nos se hallaron trescientos diez y ocho obispos, tanto de
aluviésemos á las nociones filosóficas y á las luces que Oriente como de Occidente. Despues de un maduro
pudieran suministrar los filósofos, jamás se podria de examen, en el que fueron oidos Arrio y sus partidarios,
mostrar que los insectos y las almas humanas son la el concilio ¿ su doctrina y decidió que «Jesu
obra inmediala de Dios; y que no se podrian dar res— cristo, Hijo único de Dios, nació del Padre antes de to
puestas satisfactorias á los que sostienen lo contrario; dos los siglos, Dios de Dios, luz de luz, verdadero Dios
que solo la revelacion es la que puede enseñar estas de verdadero Dios, engendrado, y no hecho consubs—
verdades. - -

tancial á su padre y por el que han sido hechas todas

Es preciso no confundir á este anlor con Arnobio, las cosas». Este es el símbolo de la fé que la lglesia
jóven sacerdote de Marsella, que vivia hácia el año repite todavia al presente en su liturgia. Arrio, rehu
60, que hizo un comentario sobre los salmos y es sando suscribir á su condenacion, fue desterrado á la
acusado de semi-pelagianismo. lliria; 17 obispos resistieron tambien al principio;
despues se quedaron reducidos á cinco, y por último,
3% Arquimandrita, (Derecho eclesiástico). á dos, que fueron desterrados.
Esta palabra es griega, y significa el superior de un Pero el anatema pronunciado contra el error no le
monasterio, que hoy se llama abad. Tambien se usaba destruyó; la mayor parte de los que no habian firma
para designar particularmente los que gobernaban do la decision del concilio, sino para evitar el destier
muchos monasterios, y debia entenderse entonces en ro, permanecieron adictos al partido de Arrio. Cons
el sentido de los que llamamos superiores generales. tantino mismo, seducido por un sacerdote arriano,
Los latinos dieron alguna vez á los arzobispos el nom recomendado por su hermana Constancia al tiempo de
bre de arquimandritas, y de esta suerte significa gefe morir, y que habia ganado su confianza, consintió en
del rebaño. (Estracto del Diccionario de jurispru llamará Árrio de su destierro en 328; y este herege,
dencia). reunido á sus partidarios, volvióá sembrar sus errores
con mas calor que antes. Pero S. Atanasio, que habia
Arrabonarios. Nombre que se dió á los sacra sucedido al patriarca Alejandro en la silla de Alejan
mentarios en el siglo XVI, porque decian que la dría, rehusó constantemente recibir á Arrio en su co
Eucaristia se dá como la prenda del cuerpo de Je munion, y por esta firmeza incurrió en la indigna
sucristo, y como la investidura de la herencia pro cion de Conslantino.
metida. Sancharo enseñó esta doctina en Transilva Desde entonces los arrianos se hicieron un partido
nia. Véase Pratéolo en la palabra ARRABONAnios. formidable: celebraron muchos concilios, en los cua
Esta palabra viene del latin arrha ó arrhabebo, les se encontraron los señores. Lograron hacer des
arra, gage, fianza, Los católicos convienen en que la terrar á muchos obispos, los mas adictos á la fé de Ni
Eucaristia es una fianza de la inmortalidad bienaven cea, en particular á S. Atanasio y á S. Eustaquio obispo
turada; pero que es uno de los efectos, y no su esen de Antioquia, Interpretaron en mal sentido la doctrina
cia, como sostenian los hereges de que se trata. del concilio de Nicea, principalmente el término con
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substancial, decian que esta palabra podia hacer con en todo el imperio, de suerte que hácia el año 380,
fundir la persona del Hijo con la del Padre, y reno esta heregia, despues de sesenta años de tumultos, no
var el error de Sabelio, y tuvieron gran cuidado de osó ya manifestarse. A principios del siglo V, los
quitarla de todas las profesiones de fé que redactaron. godos los vándalos y los bárbaros, que estaban infec
Pero sin disputa, sus variaciones en estas confesio tados con ella, quisieron restablecerla en las Galias y
nes de fé, en las que no podian convenir, y que cam— en Africa; ejercieron muchas violencias, é hicieron
hiaron por lo menos veinte veces, probaban demasia un gran número de mártires; los visogodos la intro
do la necesidad de un término que cortara de raiz to—dujeron en España, en donde subsistió por mas tiem
dos sus subterfugios. * p0 bajo la proteccion de los reyes que la habian abra—
-

El mismo Constantino no pudo hacer que Alejandro zado; pero habiéndola abjurado estos por último, de
obispo de Constantinopla, recibiese á Arrio en su co sapareció hácia el año 660. La veremos renacer de
munion; este herege murió de una manera trágica sus cenizas en el siglo XVI.
en estas mismas circunstancias el año 336; los queII. Es probable que el arrianismo hubiera sub
acusan á los católicos de haberle envenenado, los ca yugado á todo el Oriente, si sus partidarios hubieran
lumnian sin fundamento y por pura malignidad. podido ponerse de acuerdo; pero como todos los he—
Despues de la muerte de Constantino, ocurrida el reges, se dividieron ¿ pronto. Las dos fracciones
año 337, el partido de los arrianos tan pronto, era principales fueron la de los arrianos puros y la de los
fnerte como débil, segun se encontraban protegidos ó semi-arrianos. Los primeros decian, sin rodeos, como
proscriptos por los emperadores. Bajo el imperio de Arrio, que el Hijo de Dios era una criatura, y por
Constancio, que los favorecia, tenian á todo el Orien consiguiente muy inferior y desemejante á su Padre:
te en conmocion con sediciones y violencias; pero lo que hizo que se llamasen anomianos, desemejantes.
Constantino el jóven y Constante, que reinaban en el eles denomina tambien acacianos, eudoacianos, eu
Occidente, impidieron al arrianismo que hiciera mu sebianos, aecianos, eunomianos ursacianos, etc, porque
chos progresos allí. En 351 Constancio, dueño de todo Acacio, obispo de Cesarea, Eudoxio, obispo de An
el imperio por la muerte de sus dos hermanos, prote tioquía, Eusebio de Nicodemia, Aecio, Eunomio, Ur
gió la heregia mucho mas que antes; se celebraron sacio, obispo de Tiro ó de Sigedum, estuvieron suce
muchos concilios en Italia, en los que dominaron los sivamente á su cabeza; pero no parece que este par—
arrianos; otros en los cuales triunfaron los católicos, tido haya sido el mas numeroso: su heregia, pro
condenaron á Arrio y sus partidarios, y confirmaron puesta sin disfraz, seducia los ánimos.
la fé de Nicea. En el concilio de Arlés, en 353, en el Los semi-arrianos, que acaso pensaban del mismo
de Milan, celebrado en 355, en Rimini, en 359, mu— modo en el fondo, disimulaban sus verdaderas opi
chos obispos vencidos por violencia, suscribieron á la niones. De ningun modo podemos conocer mejor sus
condenacion de S. Atanasio, y firmaron unas confe artificios y rodeos, que ecsaminando la conducta de
siones de fé en las cuales la palabra consubstancial es Eusebio de Cesarea, que parece haber pertenecido
taba suprimida: Los que dedujeron de esto que aque constantemente á este partido. No ponia ninguna di
llos obispos habian firmado el arrianismo, abusaron ficultad en decir, como el concilio de Nicea, que Je
de los términos; las profesiones de fé á que suscribie— sucristo es el Verbo, la razon ó la sabiduria divina,
ron no espresaban con bastante esactitud el dogma Dos de Dios, luz de luz, enjendrado por el Padre antes
catolico; pero tampoco espresaban el error de Arrio, de todos los siglos, y que ha hecho todas las cosas; pe
pues que decian ó que el Hijo es semejante al Padre en ro no confesaba que este Verbo fuese enjendrado ab
sustancia, óque lees semejante en todas las cosas, ó que aeterno, y coeterno al Padre; pretendia, como lo ha
le es semejante segun las Escrituras, etc. Estas no son cen aun los socinianos, que el Padre habia dado
heregias aunque los arrianos abusaban maliciosamen el Ser al Hijo antes de la creacion; y cuando decia
te de estas espresiones vagas para sembrar su error. que este no es una criatura, entendia que no es una
Lo mismo acontece con la fórmula que el Papa Li criatura semejante á las demas, sino de una natura
berio firmó por debilidad en su destierro, el año 357. leza mucho mas perfecta y tan semejante á Dios co—
Véase Liberto. Es constante, por otra parte, que du— mo una criatura puede serlo. Por esto mismo es por
¿
rante todas las disputas de los pueblos que lo que los semi-arrianos, en lugar de la palabra ho—
no comprendian nada de ellas, continuaban creyen moousios, consubstancial, substituian la de homoius
do y profesando el dogma dela divinidad de Jesucris— sios, semejante en substancia.
to. Los mismos obispos arrianos no se atrevian á pre Eusebió, aun profesando en el símbolo de Nicea,
dicar en público, como Arrio, que el Hijo de Diós es que el Hijo es consubstancial al Padre, entendia que
una criatura sacada de la nada; que es inferior en el Hijo ha salido del Padre, no por division ó por se
naturaleza al Padre; que no es Dios en todo el ri paracion, como un cuerpo que forma parte de otro
gor de la palabra. ¿Cómo, pues, puede sostenerse que cuerpo, sino sin cambio y sin disminucion de la subs
en la época de que hablamos, el arrianismo habia so lancia del Padre, asi por consubstancial no entendía
focado la fé catóólica, y dominaba en la Iglesia? siempre mas que una semejanza imperfecta en la subs
Juliano, que subió al imperio el año 362, dejó dis tancia, y no una perfecta igualdad con el Padre. No
putar á los arrianos y á los católicos: su reinado no rehusabael condenará Arrió ni el pronunciar anatema
duró mas que dos años; el de Joviano fue de algunos á todos los que enseñaban que el Verbo ha salido de la
meses. Valente, dueño del imperio el año 36, favo nada, ó de lo que no era; que huho un tiempo en
reció y abrazó el arrianismo; Valentiniano su her que aun no ecsistia, porque decia que estas espresio
mano, trabajó eficazmente en estirparle en el Occi— nes no estaban en la Escritura santa. Asi se esplica
dente; Graciano, y despues Teodosio, le proscribieron en la carta que escribe al pueblo de Cesarea, despues
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del concilio de Nicea. Sócrates, Hist. ecles, l. 1.” c. 8.
no cesan de vituperarnos el triteismo ó la adoracion
En las demas obras suyas ha negado mas de una vez de tres dioses.
la eternidad del Verbo y su igualdad con el Padre. ¿Es creible que Dios, que en el antiguo Testamen
Petavio, Dogm. théol. t. 2, l. 1" c. 11 y 12. Muchos to se mostró tan celoso del culto supremo esclusivo,
socinianos se sirven todavia de los mismos artificios ¿ repetia contínuamente á los judios: Yo soy solo
para paliar la impiedad de su opinion respecto de la ios, no hay mas Dios que yo, haya permitido que el
divinidad de Jesucristo. Véase SEMI ARRIANismo. universo fuese trastornado para establecer una reli—
Este abuso contínuo de los términos, estas esplica gion, que no tiende mas que á ofuscar por su creencia
ciones sutiles para alterar el sentido de las palabras y su culto el dogma capital de la unidad de Dios,
de la Escritura santa, estas espresiones ambiguas en sin el cual no puede eesistir la verdadera religion?
las profesiones de fé de los arrianos, estas dispulas En este mismo caso, los judios se fundan bien pa—
siempre renacientes entre ellos, demostraban, sufi ra permanecer en la incredulidad. El dogma de la
cientemente el doblez de su caracter y la falsedad de unidad de Dios es el escudo que eljudio Orobio no de
su opinion. Creian haber obtenido una gran victoria ja de oponer á los argumentos de Limborch; este, que
cuando por medio de la intriga ó de la violencia con era un sociniano disfrazado, afectando dejará un la—
seguian hacer firmará los obispos católicos una pro do el dogma de la Trinidad y el de la divinidad de Je
fesion de fé en la ¿ no se encontraba la palabra con sucristo, hacia evidentemente traicion á la causa del
substancial. Qué iferencia cubre esta marcha tor cristianismo que queria defender. Véase Philippi á
tuosa de la heregia y la conducta franca y firme de Limborch amica collatio cum erudito Judaro, terce
la Iglesia católical El concilio de Nicea desde luego, ra parte.
y con una sola palabra, fijó la creencia de una mane 2.º Jesucristo ha manifestado que habia venido
ra irrevocable. La palabra consubstancial espresaba al mundo para enseñar á los hombres á rendir á Dios
toda la energia y verdadero sentido de las espresio el culto de adoracion en espiritu y en verdad. Joannes,
mes de la Sagrada Escritura; prevenia todas las equi c., y. 2. Tambien quiere que todos honren al Hi
vocaciones y sutilezas de los arrianos; la Iglesia, jo como honran al Padre, c. 5, y . 23. Si no fuera un
despues de fa adoptado una vez, jamás la aban solo Dios con el Padre, este culto seria justo y legíti
donó; se conservó en todas las profesiones de fé y en mo? Es una profanacion y una impiedad. Hagamos
los diversos concilios en que los católicos estuvieron jueces todavia á los socinianos. ¿Hay alguno de ellos
en libertad de esponer sus creencias: apesar de todos que se crea obligado á rendir á Jesucristo el mismo
los ataques de la heregia, en el espacio de catorce si culto supremo, la misma adoracion que rinde á Dios
los, la consubstancialidad del Verbo es todavia la fé su Padre? En vano tratan de buscar paliativos; se de
e esta misma Iglesia. Véase CoNsUBSTANCIAL, DiviNI duce siempre de su opinion que Jesucristo, por medio
DAD DE JESUCRISTO, HIJO DE DIOS. -
de esta funesta leccion, ha querido engolfarños en una
ll. Uno de los artificios que emplean los fautores supersticion grosera é inevitable, y en la que ha in
del arrianismo, ha sido el representar estas disputas currido efectivamente toda la cristiandad. Mientras
como cuestiones indiferentes en el fondo del cristia que por una parte los socinianos afectan prodigará
nismo, que no valian la pena de meter tanto ruido, y el Jesucristo los títulos mas pomposos, por otra nos dan
pretender que se puede ser bien cristiano sin suscribir á entender que ha sido el menos sabio de todos los le
á la decision del concilio de Nicea. Los incrédulos no fºres y un usurpador de los honores de la Divi
han dejado de apoyar esta pretension, á fin de cubrir Ill(1301.
de ridículo á los Padres del siglo V, y hacer al 3.° Cuando citamos las palabras de S. Pablo Phi
celo por la religion responsable de las turbulencias lip. c. 2, y. 6: «Imitad á Jesucristo, que estando en
que e ¿ ha causado en el mundo. Por el la forma de Dios no ha considerado como una usur
contrario, nosotros sostenemosque la divinidad de Je pacion el igualarse á Dios, etc»., los socinianos nos di
sucristo, fundada en la consustancialidad del Ver cen que traducimos mal, que el testo dice: «Jesu
bo, es el dogma fundamental del cristianismo; que si cristo que estando en la forma de Dios , no ha hecho
este dogma es falso, Jesucristo estableció una reli su presa de igualarse á Dios» ó no se ha atribuido la
gion falsa. - - igualdad con Dios.
1.° Es evidente que si las tres Personas divinas, Decimos que esta esplicacion sociniana es falsa. En
el Padre, el Hijo y Espíritu Santo, no son un solo primer lugar, no es cierto que Jesucristo no se haya
Dios en el sentido mas esacto y rigoroso, el cristianis igualado á Dios, dice: «Mi Padre y yo somos una mis
mo, tal como subsiste en todas las comuniones que no ma cosa». Joan. c. 10, y. 31; El que me vé, véá
son arrianas ó socinianas, es un verdadero politeismo, mi Padre», c. 1, }.9; «Todo lo que es de mi Padre
puesquerendimos á estas tres Personas divinas, el mis es mio», c. 16, y, 15. Quiere que todos honren al
mo culto supremo. Entre los paganos y nosotros no ha Hijo, como honran al Padre» c. 5, y 23. Querer ser
brámas diferenciasinoel que ellosadmitian mayor nú honradocomo Dios, es seguramente igualarse á Dics;
cero de dioses que nosotros, y que nosotros sabemos tal ha sido el crimen y la locura de todos aquellos que
disfrazar nuestro polileismo con sutilezas que á ellos se han hecho rendir los honores divinos. En segundo
les eran desconocidas. En este caso, el mahometismo, lugar, si Jesucristono es igualá Dios, en dónde está la
que se limita al culto de un solo Dios, es una religion humildad de no pretender el serlo? Tener solo este
mas pura que el cristianismo. Abbadie ha llevado es— pensamiento seria una impiedad. En tercer lugar, en
ta consecuencia hasta la demostracion , en su Trata esta hipótesis, S. Pablo y los demas apóstolesson pre
do de la divinidad de Jesucristo. Se encuentra confir varicadores; han igualado á Jesucristo con Dios, pues
pmada con el asentimiento de todos los socinianos, que que le han dado todos los atributos de la Divinidad, la
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existencia antes de todos los siglos, la omnipotencia,fé para los protestantes, porque no reconocian como
el poder creador , la ciencia y a sabiduría ivina, el dogma de fé sino lo que está clara y terminantemen
nombre mismo de Dios. Han contradicho el ejemplo te enseñado en la Sagrada Escritura; no pueden, pues,
de Jesucristo, exhortando á los fieles á imitarle. aun en el dia, considerar á los socinianos como he
...”. Desde que los nuevos arrianos desconocieron reges. No sin justicia les viluperamos su conniven
la divinidad de Jesucristo, les ha sido necesario des cia con los enemigos de la divinidad de Jesucristo.
truir sucesivamente todos los dogmas del cristianis Convenimos en que la Iglesia no habia consagrado
mo , la Trinidad, la encarnacion, la redencion de los todavia la palabra consubstancial para espresar este
hombres por Jesucristo, el pecado original, la nece dogma, pero de esto no se deduce que este dogma no
sidad del bautismo para los niños, la eficacia de los fuera aun creido, porque se espresaba por otros tér—
sacramentos, las obras satisfactorias, etc. Han hecho minos lo que este significa, diciendo que el Hijo ó el
consistir la religion cristiana en creer solo la unidad Verbo es eterno y perfectamente igual al Padre. Si los
de Dios; en considerar á Jesucristo como un enviado arrianos hubieran querido espresarse de la misma
de Dios, sin informarse de lo que es personalmente; manera, no se les habria condenado.
el tomar el Evangelio como regla de fé y de conducta, Mosheim añade que si se consideran los medios que
segun cada uno lo comprenda. Este es el deismo pu emplearon los nicenianos y los arrianos para defender
ro. No es de admirar que esta licencia haya abortado sus opiniones, apenas se podrá decidir cuál de los dos
todos los sistemas posibles de incredulidad. partidos escedió mas los límites de la probidad, de la
¿Es ¿ este el sistema sublime de religion que caridad y de la moderacion. Ibid. S. 15.
Dios habia preparado por espacio de cuatro mil años, No nos detendremos en refutar la indecencia del
para cuyo establecimiento obró tantos prodigios, y nombre de nicenianos que por desprecio se da á los
cambió la faz del universo? Jamás seremos tan insen católicos; Mosheim pudo llamarlos tambien homoou
satos que lo creamos. sianos, como hacian los arrianos; pero sí les pregun
Se nos dice en el dia que antes del concilio de Ni tarémos en qué han violado los católicos la probidad
cea, la doctrina respecto á las tres Personas divinas respecto de sus adversarios:. Que los arrianos hayan
no estaba fijada; que nada se habia prescrito á la fé eslado en general de mala fé, nos parece incontesta—
de los cristianos sobre este artículo, ni determinado ble: ¿pero los católicos han empleado como ellos los
las espresiones que tenian que emplearse al hablar de equívocos, las espresiones capciosas, las falsas pro
este misterio; que los doctores cristianos opinaban de teslas de celo hácia el grado del dogma, las falsas pro
diferente modo sobre este objeto, sin que nadie se es mesas de paz, etc., de que se servian los primeros
candalizara de ello, etc. Acaso se creerá que es un so para conseguir sus fines? Es verdad que Mosheim ha
ciniano el que se espresa de esta manera: no, es Mos tenido á bien acusar á S. Ambrosio y otros obispos
heim. Hist. ecles. del siglo IV, 2.° parte, c. 5, de haber supuesto falsas reliquias y milagros para
S.9. Beausobre le habia dado ejemplo. Hist. del ma imponer á los fieles y confundir á los arrianos; pero
nich. l. 3, c. 7. está probada esta acusacion? Por lo que respecta á la
Mientras tanto, Bullus, en su defensa de la fe de Ni falta de caridad, no vemos en qué sean culpables los
cea, Mr. Bossuel, en su sesta advertencia á los pro católicos porque se hayan defendido tanto como les
testantes y otros han probado de una manera inven fue posible contra hereges audaces, violentos, sedi—
cible que antes del concilio de Nicea, los Padres de ciosos, que abusaban de la autoridad de los empera
los tres primeros siglos profesaron manifiestamente la dores á quienes habian seducido, y que hicieron los
eternidad del Verbo y su consubstancialidad con el Pa mayores esfuerzos para destruir la fé de la Iglesia.
dre. Una prueba positiva de este hecho es que nun Leemos que los arrianos hicieron muchos mártires,
ca han querido referirse Arrio ni sus partidarios al jui pero en ninguna parte encontramos que los hubiera
cio de los antiguos doctores, y que tenian la pretension entre ellos: no es pues cierto que los católicos hayan
de entender mejor la Escritura que todos aquellos violado tanto las reglas de la moderacion como los
que los habian precidido. El patriarca de Alejandría, arrianos. Despues de sesenta años de turbulencias no
ue habia condenado á Arrió, se lo reprochaba ya. podemos reprobar el que Teodosio dictara leyes se
eodoreto, Hist. ecles., l. 1 º c. l. veras contra estos últimos; no se vió obligado á der
Asi mismo en el quinto concilio de Constantinopla, ramar sangre para hacerlas ejecutar.
bajo el imperio de Teodosio, el año 383, sehusaron ser IV. La razon de esta parcialidad de Mosheim y
juzgados segun el sentir de los antiguos Padres. Sócra. de los protestantes á favor del arrianismo, no es difi
tes, Hist. ecles, l. 5, c. 10, cil de averiguar; es porque se vió renacer esta here
Por lo tanto estaban convencidos de que los Padres gía en el siglo XVIII de los principios del pro
de los tres primeros siglos no pensaban como ellos, y tetantismo. Desde que Lutero y Calvino establecie
los católicos lo sostenian de la misma suerte. ¿Se sabe ron como máxima, que la única regla de fé es la Sa
en el siglo XVIII acerca de este punto que en grada Escritura interpretada segun le agrada á cada
el V? uno en particular, se encontraron predicadores que
Por otra parte, ó el dogma de la eternidad y de la pervirtieron el sentido de los pasages por los cuales se
igualdad perfecta del Verbo con el Padre está clara y prueba la distincion de las tres personas de la San
terminantemente revelado en la Sagrada Escritura, ó tísima Trinidad, su coexistencia eterna, su igualdad
no lo está Si lo está, luego era ya una creencia en los perfecta , y la unidad de la naturaleza divina; asi la
tres siglos primeros, y no podía dejar de creerse sin divinidad de Jesucristo se ha hecho para ellos un pro
ser herege; si no lo está, tanto antes del concilio de blema. Lutero mismo y Calvino hablaron de este
Nicea como en el dia, nunca ha sido un dogma de misterio en términos muy capaces de hacer dudar de
TOMO l. 27
 ARR 166 A RT
su fé, Hist. del socinianismo, 1." part. e. 3. Muchos sostenido tambien el semi-arrianismo en Ginebra,
anabaptistas, que salieron de la escuela de Lutero, en una tesis pública, y un folleto titulado Dissertatio
redicaron el arrianismo en Suiza, Alemania y Ho historico-theologica, de Christi deitate. Los arminia
anda; Okin y Bucero, bajo el reinado de Eduardo VI, nos de Holanda y muchos teó ogós anglicanos pasan
arrojaron los primeros gérmenes en Inglaterra. Servel por tener la misma opinion. No es de admirar que los
trató de establecerlo en Ginebra, Calvino le castigó protestantes en general tengan mucho menos aver
con el último suplicio. El temor de sufrir la misma sion á los socinianos que á los católicos.
suerte separó de Ginebra á Gentilis, Blandatra y otros En las palabras Hijo DE Dios y Jesucristo proba
¿ sostenian este error; se reliraron á Polonia, en remos que el dogma católico se opone á todos estos
onde encontraron protectores, y fundaron socieda erroreS.
des arrianas. Los dos Socinos, tio y sobrino, consi
guieron reunirlos á todos poco mas ó menos bajo la Arte. Ciertos críticos muy mal instruidos, han
misma bandera, y dieron asi su nombre á toda la acusado al cristianismo de haber contribuido á la de
secta. V. socINIANISMo. gradacion de las artes. Por poco que se haya leido la
Los protestantes, avergonzados con esta posteridad historia, se habrá visto que en Europa fué el efecto
que salió de su seno, trataron en vano de sofocarlos de la irrupcion de los bárbaros, y en Asia una con
con todas sus fuerzas; en todas las conferencias y secuencia de los estragos de los mahometanos; que
disputas que tuvieron con los socinianos, estos les han sin la religion cristiana todas las artes liberales hu—
hecho ver que con solo la Sagrada Escritura no les bieran desaparecido. Los mahometanos horrorizan
podian convencer nunca de error; y cuando han tra las estátuas; los iconoclastas, con el objeto de darles
tado de emplear contra ellos la tradicion, el sentir degusto, rompieron las imágenes; los bárbaros que vi
los Padres y la creencia constante de la Iglesia cris nieron del Norte eran demasiado groseros para hacer
tiana, echaron en cara con razon á los protestantes el caso de la pintura, de la escultura, de la arquitectura
contradecir el principio fundamental de la reforma, y de las artes de adorno; fué desterrada toda pompa
y de recurrir á un arma á que hicieron profesion de esterior, esceptuando la del culto divino y la de los
renunciar. La via de autoridad, las leyes penales, y templos del Señor. En estos fué en donde se conser
los suplicios mismos que los protestantes emplearon vó un resto del gusto, que tomó vuelo en el renaci—
mas de una vez hácia los nuevos arrianos, son una miento de las letras, y estas mismas solo se preserva
inconsecuencia todavia mas repugnante, pues que no ron de su completa ruina por la religion. V. LETR as,
han dejado de quejarse ellos mismos cuándo los ca CIENCIAS.
tólicos echaron mano de estos medios contra ellos.
Todos produjeron muy poco efecto; no impidieron ARTE DE LOS ESPIRITUS ó arte angélico. Medio
que los socinianos penetrasen en la Transilvania, en supersticioso para adquirir el conocimiento de todo
la Prusia, en la Alemania baja, en Holanda y en In lo que se puede saber con el ausilio de su angel cus
glaterra, ni que se multiplicasen entre las diferentes todio, ó de cualquier otro angel bueno. Se distin
sectas que gozaban de la tolerancia civil. En el siglo guen dos clases de arte angélico, uno oscuro que se
último y en el presente el arrianismo mitigado ó el ejerce por via de elevacion ó de éstasis; el otro claro
semi-arrianismo ha encontrado muchos partidarios. y distinto el cual se practica por el ministerio de los
Efectivamente, los nuevos enemigos de la divinidad ángeles, que se aparecen á los hombres bajo formas
de Jesucristo han comprendido, como los del siglo corpóreas, y que hablan con ellos. Tal vez se sirvió
IV, que el arrianismo puro jamás podria prevale de este arte el padre del célebre Cardano, cuando dis
cer; nunca podrán persuadir á los que respetan la putó contra los tres espiritus que defendian la doctri
Sagrada Escritura, que el Hijo de Dios es una pura na de Averròes, y que él recibió ó creyó recibir lu
criatura sacada de la nada en tiempo, y que no exis ces de un angel que tuvo consigo por espacio de trein
lia antes del nacimiento del mundo; aun todavia me ta y tres años. Es verdad que este arte es supersti
nos que Jesucristo no es mas que un hombre, aunque cioso, pues que no está autorizado por Dios ni por la
mas perfecto que los demás. Fausto, Socino y otros Iglesia, y que los ángeles, por cuyo ministerio se su
se han atrevido á decirlo y vituperar el culto rendi— pone que se ejerce, no son mas que espíritus, de ti
do á Jesucristo, pero han tenido pocos sectarios acer nieblas y ángeles de Satanás. Por otra parte las ce
ca de este punto. Estos han adoptado en el dia el se— remonias que usan no son mas que conjuros por los
mi-arrianismo poco mas ó menos como Eusebio de cuales se obliga á los demonios, en virtud de algun
Cesarea y otros lo sostenian; por esta razon recha pacto, á decir lo que saben, y hacer los servicios
zan el nombre de socinianos porque no siguen en ri— que se les exige. Véase ARTe NotoRio; Cardano,
gor las opiniones de Socino. Dicen que el Verbo divi l. 16, Derer. variet. Thiers, Tratado de las supersti
no fué creado antes de todas las cosas; algunos has— ciones, t. 1, p. 275.
ta han dicho que ha sido criado ab alterno; otros
sin usar el término de creacion, dicen que las tres ARTE NOTORIO. Medio supersticioso por el cual
Personas divinas son iguales en perfeccion, pero que se promete la adquisicion de las ciencias por infusion
hay entre ellas una subordinacion de naturaleza en y sin trabajo, practicando algunos ayunos y haciendo
punto á existencia y derivacion. Asi se espresa el ciertas ceremonias inventadas con este objeto. Los
doctor Clarke acusado de semi-arriano. Mosheim, que hacen profesion de este arte aseguran que Sa
IHist. ecles. del siglo XVIll al fin, nota del traduc lomon es su autor, y que por este medio adquirió en
tor inglés. No somos bastante hábiles para enten una noche esa gran sabiduría que le hizo tan célebre
der lo que significan estos términos. En 1777 se ha en el mundo. Añaden que comprendió los preceptos y
 ART 167) ART

el método de este arte en un pequeño libro que toman o de 1803, Pio VII anunció que pedia la supresion ó
por modelo. He aqui el modo con que pretenden ad a modificacion de estos artículos llamados ridícula
quirir las ciencias, segun el testimonio del P. Del mente orgánicos, por haber sido redactados sin su
rio: mandan á sus aspirantes que frecuenten los sa participacion y ser opuestos á la disciplina de la Igle
cramentos, ayunen todos los viernes á pan y agua, sia. La reclamacion de la Santa Sede tuvo lugar bajo
y oren mucho por espacio de siete semanas; despues la forma de una carla dirigida por medio del carde
les prescriben otras oraciones y les hacen adorar cier nal legado Caprara á Mr. Talleyrand, ministro de ne
tas imágenes los siete primeros dias de la luna nueva gocios estrangeros.
al salir el sol, durante tres meses; hacen tambien que Su importancia no nos permite omitir el testo de la
elijan un dia en que se sientan mas, piadosos que de referida carta.
ordinario y mas dispuestos á recibir las inspiraciones «Monseñor: estoy encargado de reclamar contra esta
divinas; los ponen en estos dias de rodillas en una de la ley del 18 germinal, que se ha designado
iglesia ú oratorio, ó en medio del campo, y les hacen ajo el nombre de artículos orgánicos. Lleno este de
decir tres veces el primer vesículo del himno veni, ber con tanta mayor confianza, cuanto que cuento
Creator Spiritus, etc. asegurándoles que despues se - desde luego con la benevolencia del gobierno, y con su
rán hombres de ciencia como Salomón, los profetas ¿? adhesion á los verdaderos principios de la re
y los apóstoles. Santo Tomás de Aquino demuestra 1.10l.
la vanidad de este pretendido arte; S. Antonino ar— "La calificacion que se dá á estos artículos, parece
zobispo de Florencia, Dionisio el cartujo, Gerson y el ria desde luego suponer que no son otra cosa mas que
cardenal Cayetano, prueban que es una curiosidad la continuacion natural y la esplicacion del concor
criminal por la cual se lienta á Dios, y un pacto tá dato religioso. Sin embargo, es positivo que no han
cito con el demonio: tambien fue condenado este ar sido acordados con la Santa Sede, que tienen una es
te como supersticioso por la facultad de teología de lension mayor que el concordato, y que establecen en
Paris el año 1320. Delrio, Disquis. Magic. parte. 2"; Francia un código eclesiástico sin el concurso de la
Thiers, Tratado de las supersticiones, ibid.» Santa Sede... ¿Cómo podria admitirlo su Santidad no
habiendo sido invitada para examinarlo? Este código
ARTE DE S.ANSELMO. Medio de curar las he tiene por objeto la doctrina, las costumbres, la dis
ridas mas peligrosas tocando tan solo á los paños que ciplina del clero, los derechos y deberes de los obispos.
están aplicados sobre ellas. Algunos soldados italianos los de los ministros inferiores, sus relaciones con la
que le profesan, atribuyen su invencion á S. Anselmo; Santa Sede y el modo de ejercer su jurisdicion. Luego
pero Delrio asegura que es una supersticion inventa— todo esto se refiere á los derechos imprescriptibles
da por Anselmo de Parma, famoso mágico, y ohserva de la Iglesia; ella ha recibido (1) de solo Dios la au
que los que se han curado asi, si es que sucede, vuel torizacion de decidir las cuestiones de la doctrina so—
ven á casa con mayores males, y acaban desgraciada bre la fé, ó acerca de la regla de las costumbres y de
mente su vida. Delrio Disquis Magic. l. 1 º dar cánones ó reglas de disciplina.
«Mr. de Hericourt (2), el historiador Fleury, los
ARTE DE S. PABLO. Especie de arte notorio mas célebres abogados generales, y el mismo Mr. de
que algunos supersticiosos dicen haber sido enseñados Castillon (3) confiesan estas verdades. Este último re
por S. Pablo despues que fue arrebatado al tercer conoció en la Iglesia el poder, que habia recibido de
cielo; no se sabe bien las ceremonias que practican Dios para conservar por la autoridad de la predicacion
los que pretenden adquirir las ciencias por este me de las leyes y de los juicios, la regla de la fé y de las
dio sin estudio y por inspiracion; pero no puede du costumbres, la disciplina necesaria para la economia
darse que este arte sea ilícito; es constante que S. Pa de su gobierno y la sucesion y perpetuidad de su mi
blo jamás reveló lo que oyó en su arrobamiento, pues nisterio.
que él mismo dice que oyó palabras inefables, que no «Por consiguiente su Santidad no ha podido menos
es permitido referirá ningun hombre. V. ARTe Noro de ver con un profundo dolor que, despreciando la
Rio. Thiers Tratado de las supersticiones. observancia de estos ¿ potestad civil hays
querido arreglar, decidir, y transformar en ley unos
Artemonitas. Artemas ó Artemon enseñaba artículosque interesan esencialmente á las costumbrea
tº mas ó menos la misma doctrina que Theodoto. la disciplina, los derechos, la instruccion, y la juris
. TEoDoc ANos. Decia que Jesucristo no habia recibi dicion eclesiástica. ¿No es de temer que esta innova
do su divinidad sino al nacer, y que el Salvador no cion engendre recelos que haga creer que la Iglesia de
odia llamarse Dios mas que en un sentido impropio. Franciaestá esclavizada aun en los objetos puramen
•w.

n loma tuvo algunos partidarios. te espirituales al poder temporal, y prive á muchos

eclesiásticos beneméritos de aceplar cargos de su pro
Artículo de fé. Véase DOGMA. pio ministerio?
¿«Qué será si registramos cada uno de estos arti
Artículos orgánicos. Nombre bajo el cual se culos en particular?
designa comunmente la ley del 18 germinal (1), año «El primero manda que ninguna bula, breve, res
X, cuyo fin real era por el contrario desorganizar toda cripto, etc. procedente de la Santa Sede, puedan po
la economia del concordato del 15 de julio de 1801. En 1) Decretos del consejo de 16 de marzo y 31 de julio de 1731.
la elocuencia pronunciada en consistorio el 24 de ma b. reunier reanua. primera parte c. 19 preám
1) Séptimo mes del año republicano de Francia que se eon 3) Requisitoria contra las actas de la asamblea del elero
taba del 21 de marzo al 19 de abril. en 1765. -
 ART 168 ART

nerse en ejecucion, ni aun publicarse sin la autoriza de los que están encargados de anunciarla. No obs—
cion del gobierno. lante, Jesucristo quiso qne su divina palabra fuese
«Esta disposicion tomada en toda su latitud no las constantemente libre: que se pudiera predicar sobre
tima evidentemente la libertad de la enseñanza ecle los techos en todas las naciones, y á presencia de to
siástica? No somele la publicacion de las verdades dos los gobiernos. Cómo hemos de ligar este dogma
cristianas á formalidades humillantes? No coloca las católico con la indispensable formalidad de una com
decisiones concernientes á la fé y á la disciplina bajo probacion de poderes y de un permiso civil para eger
la dependencia absoluta del poder temporal? No con cerlos? ¿Los apóstoles y los primeros obispos de la
cede á la potestad que intentase abusar de esta dispo Iglesia naciente hubieran podido predicar el Evange
sicion los derechos y facilidades de reprimir, de sor lio si los gobiernos hubiesen egercido sobre ellos se
prender y aun de sofocar el lenguage de la verdad, mejante derecho?
que un pontífice, fiel á sus deberes, quisiera dirigir á «El tercer artículo estiende esta medida á las cáno
los pueblos confiados á su solicitud? nes de los concilios aun generales. Estas asambleas
«Nunca ha sido tal la dependencia de la Iglesia, tan célebres no gozaron en parte alguna de mayor
aun en los primeros siglos del cristianismo. Ninguna respeto y veneracion que en Francia. ¿Cómo es pues
polestad exigió entonces la comprobacion de sus de— posible que en esta misma nacion esperimenten lantos
crelos. Sin embargo la Iglesia no ha perdido ningu obstáculos, y que una formalidad civil conceda el de
na de sus prerogativas al admitir á los emperadores recho de eludirlas y aun rechazar sus decisiones?
en su seno; debe gozar (1) de la misma jurisdicion «Se dice qne se las quiere examinar; mas la via de
de que gozaba bajo los emperadores paganos. Jamás eacamen en materia de religion está proscripta en el se
es permitido restringir su autoridad, porque la ha re no de la Iglesia católica; solo la admiten las comunio
cibido de Jesucristo. Con qué dolor no debe, pues, ver nes protestantes, y de aqui provino la espantosa va—
la Santa Sede las trabas que se intentan ponerá sus riedad que reina en sus creencias.
derechos? «Ademas; ¿cuál seria el objeto de estos exámenes?
«El clero de Francia reconoció por sí mismo que El de reconocer si los cánones de los concilios están
los juicios emanados de la Santa Sede, y á los cuales conformes con las leyes francesas? Mas si muchas de
se adhiere el cuerpo episcopal son irreragables. Por— estas leyes, como por ejemplo la del divorcio, están en
qué han de necesitar, pues, de la autorizacion del go oposicion con el dogma católico, será pues necesario
bierno, puesto que segun los principios galicanos, to desechar los cánones y preferir las leyes, por mas in
man toda su fuerza de la autoridad que los pronun justo y erróneo que sea su objeto. ¿Quién podrá adop
cia, y de la que los admite? El sucesor de S. Pedro debe tar semejante conclusion? ¿No seria esto sacrificar la
confirmar á sus hermanos en la fé, segun las espresio religion, obra del mismo Dios, á las obras siempreim
nes de la Escritura: y cómo podrá verificarlo, si so— perfectas y frecuentemente injustas de los hombres?
bre cada artículo que enseñase, puede será cada ins «Bien sé que nuestra obediencia debe ser razona
tanle detenido por la negativa ó por la falta de com ble; pero no obedecersino con motivos suficientes para
probacion de parte del gobierno temporal? No se in ello, es atribuirnos no solo el derecho de examinar,
fiere evidentemente de lales disposiciones que la Igle sino tambien el de desechar arbitrariamente todo
sia no podrá saber creer mas que lo que agrade al cuanto nos desagrada.
gobierno dejarla publicar? - «Dios no ha prometido la infalibilidad mas que á su
«Este artículo lastima la delicadeza y secreto ob Iglesia; las sociedades humanas pueden engañarse.
servados constantemente en Roma en los negocios de Los mas sábios legisladores son una prueba de esta
la Penitenciaria. Todo particular puede dirigirse á verdad. ¿Por qué pues se han de comparar las deci
ella con confianza, y sin temor de ver descubiertas siones de una autoridad irrefragable con las de una
sus debilidades. Sin embargo este artículo, que nada potestad que puede errar, y hacer en esta compara
esceptua, manda que los breves, aun personales, pro cion inclinar la balanza en favor de esta última? Por
cedentes de la Penitenciaria, sean comprobados. Se 0íra parte cada potencia tiene los mismos derechos.
ria por consiguiente necesario que los secretos de las Lo que la Francia manda, puede exigirlo la España y
familias, y la consecuencia bien triste de las debili el Imperio; y como las leyes son en iodas partes dife
dades humanas se hagan públicas para alcanzar el rentes, se seguirá de aqui que la enseñanza de la Igle
permiso de usar de estos breves. ¡Qué humillacion sia deberá variar segun los pueblos, para que pueda
Qué trabas. El mismo parlamenlo no las admitia, conformarse con las respectivas leyes.
pues esceptuaba de la comprobacion las Provisiones, «Se dirá que el parlamento frances obraba de esta
los breves de la Penitenciaria, y demas espedientes suerte respecto de la presente cuestion? Bien lo sé; mas
concernientes á los negocios de particulares. no examinó segun su declaracion del 2 de mayo de
«Declara el segundo artículo, que ningun legado, 1766, sino aquello que podia, en la publicacion de cá
nuncio ó delegado de la Santa Sede podrá ejercer sus nones y bulas, alterar ó interesar la tranquilidad pú
facultades en Francia sin la misma autorizacion. No blica, y no su conformidad con unas leyes que podian
puedo menos de repelir aquilas justas observaciones cambiar desde el dia siguiente.
que acabo de hacer acerca del primer artículo. El uno «Este abuso no podria ademas ser legitimado por el
hiere la libertad de enseñanza en su origen; el otro la uso, y el gobierno conocia tanto los inconvenientes,
restringe en sus agentes. El primero suscita obstáculos que dijo en el parlamento de París el 5 de abril de 1757
á la publicación de la verdad, el segundo alapostolado por su órgano Mr. Aguesseau.
«Parece que se trata de debilitar la facultad que la
(1) reyes eclesiásticas. Vide supra.
Iglesia tiene para hacer decretos, constituyéndola de
 ART 109) All T
tal modo dependiente de la polestad civil y de su con Por otra parte los magistrados que pronunciaban
curso, que sin él no puedan los mas sagrados decretos entonces acerca de estos casos de abuso eran necesa
de la Iglesia obligará los vasallos del rey». riamenta católicos; estaban obligados á afirmarlo ba
«Finalmente, no se suscitó la cuestion del exámen jo la fé del juramento; mientras que al presente pue
en los parlamentos, segun la declaracion de 1766, sino den pertenecerá algunas sectas separadas de la igle
para hacer los decretos de la Iglesia leyes del Estado, sia católica, y tener que pronunciar acerca de unos
¿ por consiguiente para mandar su ejecucion con pro objetos que la interesan esencialmente....
íbicion bajo penas temporales de contravenirá aque El artículo 9 ordena que se ejerza el culto bajo la
llas. Asi que, estas razones no son ya las que dirigen
direccion de los arzobispos, obispos y curas. Mas la voz
en la actualidad al gobierno, puesto que la religion direccion no indica aquilos derechos de los arzobispos
católica no es ya la religion del ¿, sino únicamen y obispos. Estos tienen por derecho divino no solo el
te la de la mayoria de los franceses. derechode dirigir, sino tambien el de definir, de man
«El artículo 6.° declara que se podrá recurrir al dar y juzgar. Las facultades de los curas en las par—
consejo de Estado en todos los casos de abuso; mas roquias no son las mismas que las de los obispos en
¿cuáles son estos? El articulo no los especifica sino de
las diócesis. Por consiguiente no se han debido espre
una manera genérica é indeterminada. sar del mismo modo y en los mismos artículos, para
«Se dice por ejemplo, que uno de ellos es la usur no suponer una identidad que realmente no existe.
pacion ó el esceso del poder. Mas en materia de juris «Ademas ¿porqué no se ha hecho aquí mencion de
dicion espiritual, la Iglesia es el único juez compe los derechos de su Santidad, gefe de los arzobispos y
tente. Solo á ella pertenece el declarar en qué ó cuán obispos? Se le ha querido quitar por ventura un dere
do se ha cometido esceso ó se ha abusado de las facuta cho general que le pertenece esencialmente?
des que ella sola puede conferir. La potestad temporal «El ¿ 10, al abolir toda esencion ó atribucion
no puede conocer acerca del abuso escesivo de una cosa de la jurisdicion episcopal, pronuncia evidentemente
que no concede. sobre una materia puramente espiritual. Pues si los
«Otro de los casos de abuso, es la contravencion á territorios esentos están al presente sujetos al ordina
lasleyes y reglamentos de la república; mas si estas le rio, no lo están sino en virtud de un reglamento de
es, si estos reglamentos estan en oposicion con la la Santa Sede. Ella sola dá al ordinario una jurisdic—
octrina cristiana, ¿deberan los sacerdotes observar cion que no tenia. Así que, en último análisis, la po
los con preferencia á la ley de Jesucristo? Nunca pudo testad temporal habrá conferido unos poderes que no
ser tal la intencion del gobierno. pertenecen sino á la Iglesia. Además las esenciones no
«Secoloca tambien en la clase de abusos la infrac son tan alusivas como se ha creido. El mismo S. Gre
cion de las reglas consagradas en Francia por los sa gorio las habia admitido, y las potestades temporales
grados cánones..... Mas estas reglas han debido ema luvieron frecuentemente necesidad de recurrirá ellas.
nar de la Iglesia. Por consecuencia, á ella sola toca - «El artículo 11 suprime todos los establecimentos
pronunciar acerca de su infraccion; pues ella sola co religiosos á escepcion de los seminarios eclesiásticos y
noce el espíritu y las disposiciones de aquellas. de los cabildos.
«Se dice por fin que el gobierno tiene derecho á ¿Se ha reflexionado bien acerca de esta supresion?
formular una apelacion como de abuso contra toda em Muchos de estos establecimientos eran de una utilidad
presa que se dirijaá comprometer el hororde los ciu reconocida; el pueblo los queria y los ausiliaba en sus
dadanos, á turbar su conciencia, ó que degenere con necesidades; la piedad los habia fundado; la Iglesia
tra ellos en cpresion, injuria, ó escándalo público. los habia aprobado solemnemente á peticion de los
«Mas, si un divorciado, si un herege conocido en mismos soberanos: por consiguiente ella sola podia de
público se presenta á recibir los sacramentos, y por clarar la supresion de dichos establecimientos.
que se le niegan pretende que se le ha hecho una in «El artículo 14 manda á los arzobispos que velen
juria, publicará el escándalo, elevará su reclamacion por la conservacion de la fé v de la disciplina en las
ó queja al gobierno, se la admitirá desde luego la ley; diócesis de sus sufragáneos. Ningun deber hay mas
y sin embargo, el sacerdote acusado no habrá hecho indispensable ni mas sagrado; mas tal es tambien el
mas que su deber, pues que los sacramentos no deben deber de la Santa Sede respecto de toda la Iglesia. Por
nunca conferirse á personas notoriamente indignas. qué pues no se ha hecho mencion en el artículo de esta
«En vano es apoyarse en el uso constante de las ape. vigilancia general? Es por ventura un olvido, ó es una
laciones como de abuso. Este uso no asciendemas allá esclusion?
del reinado de Felipe de Valois, muerto en 1350. Tam «El artículo 15 autoriza á los arzobispos para co
poco fué jamás constante y uniforme; ha variado se nocer de las reclamaciones y de las quejas elevadas
gun los tiempos: los parlamentos tenian un interés contra la conducta y las decisiones de los obispos su
particular en acreditarle. Aumentaban sus poderes y fragáneos. ¿Pero qué han de hacer los obispos, si los
sus atribuciones; mas lo que lisongea no es siempre metropolitanos no les hacen justicia? A quién se diri
lojusto. Asi ¿ edicto de 1695, art.34,35, girán para alcanzarla? A qué tribunal competente ape
36 y 37, no atribuia á los magistrados seculares mas larán para juzgar acerca de la conducta de los arzo
que el eramen de las formas, prescribiéndoles al mis bispos á su vez? Esta es una dificultad de la mayor im
mo tiempo que remitiesen el fondo de esta cuestion al ortancia, d de la que no se habla. ¿Por qué no se ha
superior eclesiastico. Estarestriccion pues no ecsistede ia de añadir que el soberano pontífice puede en tal
ningun modo en los artículos orgánicos. Atribuyen in caso conocer de estas diferencias por via de apelacion,
distintamente al consejo de Estado el juicio de la for y pronunciar definitivamente segun lo enseñan los sa
ma y el de la materia. grados cánones?
 ART 170 ART
«El artículo 17 parece establecer al gobierno juez se aleja el momento de recibir las órdenes, tanto me
de la fé, de las costumbres y de la capacidad de los nor es el número de aquellos á quienes se confieren.
obispos nombrados. El es quien los hace examinar y Sin embargo todas las diócesis se quejan de la escasez
el que pronuncia en vista de los resultados del examen. de sacerdoles. Se puede esperar razonablemente que
Sin embargo, solo el soberano Pontífice tiene derecho se salisfagan las justas quejas de las diócesis, cuando
para hacer por sí ó por sus delegados este exámen, se les exige á los órdenandos un título clerical de tres
porque él solo debe instituir canónicamente, y porque cientos francos de renta? Es indudable que esta cláu—
ademas esta institucion canónica supone evidente— sula hará desertar á los ordenandos y seminaristas.
mente en el que la concede el conocimiento adqui El mismo efecto producirá la claúsula que obliga al
rido acerca de la capacidad del que la recibe. El go obispo á solicitar el permiso del gobierno para orde
bierno ha pretendido sin duda nombrar y constituirse al nar, esta cláúsula se opone evidentemente á la liber—
mismo tiempo juez acerca de idoneidad; lo que seria tad del culto, garantida á la Francia católica por el
contrario á todos los derechos y usos recibidos. ¿O art. 1" del último concordato. Su Santidad desea, y
quiere solamente asegurarse por medio de este exa— el bien de la religion lo exige, que el gobierno miti
men que su elecion no ha recaido sobre un sugeto in gue los rigores de las disposiciones que versan sobre
digno delepiscopado? Esto es lo que conviene esplicar. estos tres objetos.
«Bien sé que el reglamento de Blois prescribia se «El art. 35 exige que los obispos sean autorizados
mejanle examen; mas el mismo gobierno consintió en por el gobierno para establecer capillas. Sin embargo
derogarle. Se establecio por medio de una convencion esta autorizacion les estaba concedida por el art. 11 del
secreta, que los nuncios de su Santidadhiciesen solos es concordato. ¿Por qué, pues, exigir ahora otra nneva,
tas informaciones. Por consiguiente debe seguirse al cuando una convencion solemne habia permitido ya
resente esta misma conducta, puesto que el artículo estos
n62
establecimientos? La ámisma
el art: 23 respecto obligacionaun
los seminarios, se impo
cuan
.” del concordato manda que la institucion canonica
se confiera á los obispos en las formas establecidas antes do hayan sido, como los cabildos, especialmente au
del cambio de gobierno. torizados por el gobierno. Su Santidad vé con dolor
«El art. 22 manda á los obispos que visiten sus dió que se multiplican de este modo las trabas y dificul—
cesis en el espacio de cinco años. La disciplina ecle— tades para los obispos. El edicto de mayo de 1763ec—
siástica reducia mas el tiempo de estas visitas. La simia terminantemente los seminarios de sacar paten
Iglesia lo habia mandado asi, movida por graves y só les (1), y la declaracion del 16 de junio de 1659, que
lidas razones. En vista de esto parece que solo á ella parecia sujetarlos á ello, no fué registrada sino con
pertenece el cambiar esta disposicion. esta cláusula: «Sin perjuicio de los seminarios que se -
«Se exige por el art. 2", que los directores de los rán establecidos por los obispos para la instruccion de
seminarios suscriban á la declaracion de 1682, y en sacerdotes solamente». Tales eran tambien las dis—
señen la doctrina que en ella se contiene: ¿Por qué se posiciones del reglamento de Blois, art. 24, y las del
ha de arrojar de nuevo en medio de los franceses este edicto de Melun, art, 1.º¿Porqué no adoptar estos
germen de discordia? no es por ventura bien notorio principios? ¿A quién pertenece arreglar la instruc—
que los mismos autores de esta declaracion la han des cion dogmática y moral, y los egercicios de un semi
aprobado? Puede admitir su Santidad lo que sus mas nario sino al obispo? Semejantes materias pueden in
inmediatos predecesores rechazaron? No debe atener teresar al gobierno temporal?
se á lo que declararon Por qué deberia sufrir que la «Es un principio de derecho eclesiástico, que el vi
organizacion de una Iglesia que restablece á costa de cario general y el obispo son una sola persona, y que
tantos sacrificios, consagrase principios que no puede la muerte de este último acarrea la cesacion de las fa
profesar? No es mejor que los directores de los semi cultades del primero. Sin embargo, con desprecio de
narios se dediquen á enseñar una moral sana, mas este principio, el art. 36 proroga á los vicarios ge
bien que una declaracion que fué y será siempre un nerales sus facultades despues de la muerte del obispo.
origen de division entre la Francia y la Santa Se— Esta próroga ¿no es evidentemente una concesion de
de? (1). facultades espirituales hecha por el gobierno, no solo
«Se quiere en el art. 25 que los obispos remitan sin el competente consentimiento, sino aun contra el
todos los años el estado de los eclesiásticos que estu uso recibido de la Iglesia?
dien en su seminario: qué razon hay para imponerles «Este mismo artículo manda que las diócesis, du
esta nueva humillacion? Tal exigencia ha sido des rante la sede vacante, sean gobernadas por el metro—
conocida é inusitada en los siglos precedentes. politano ó por el obispo mas antiguo. . . . .
«El art. 26 quiere que no puedan ordenar sino á «Mas este gobierno consiste en una jurisdicion pu
los que tengan veinte y cinco años; pero la Iglesia ha ramente espiritual. Cómo podrá concederla el poder
fijado la edad de veinte y uno para el subdiaconado, temporal? Solo los cabildos están en posesion de
y la de veinte y cuatro cumplidos para el sacerdocio.ella; ¿porqué quitársela, puesto que el art. 11 del
¿Quién puede abolir estos usos, sino la misma Igle concordato autoriza á los obispos para establecerlos?
sia? ¿Se pretende no ordenar, ni aun de subdiáco «Los pastores, llamados por los esposos para ben
nos, hasta los veinte y cinco años? Esto equivaldria decir su union, no pueden egecutarlo; en vista del
á pronunciar la estincion de la Iglesia de Francia por art. 5%, sino despues de haber llenado las formalida
falta de ministros; pues lo cierto es, que cuanto mas des ante la autoridad civil; esta cláusula restrictiva y
Dice un autor francés que si el mismo Bossuet resucitara,
humillante ha sido desconocida hasta el presente en
diria al ver los daños que causó la famosa declaracion: Abeat quo
libuerit declaratio (l.2. (1) Memorias del clero, tom. 2
 ART 171 ARZ
la Iglesia; resultando de ella dos clases de inconve un sueldo, que les está asegurado, sino que conservan
nientes. -

á la vez los bienes que su Iglesia posee y las obla

«Afecta el uno á los contrayentes; el otro lastima ciones que se les hacen.
á la autoridad de la Iglesia y humilla á sus pastores. Con cuánta amargura no debe ver la Iglesia esta
Puede suceder que los contrayentes contentándose enorme diferencial Solo ella no puede poseer bienes in
con cumplir con las formalidades civiles, y despre— muebles; las sociedades separadas de ella pueden go
ciando la observancia de las leyes de la Iglesia, se zarlos libremente; se les conserva, apesarde que sure
crean legítimamente unidos, no solo á los ojos de la ligion no sea profesada sino por una minoria muy cor
ley, en cuanto á los efectos puramente civiles, sino ta; mientras que la inmensa mayoria de los franceses
tambien ante Dios y la Iglesia. y los mismos cónsules profesan la religion á la que
«El segundo inconveniente lastima á la autoridad se priva legalmente del derecho de poseer bienes in—
de la Iglesia y humilla á los pastores, por cuanto los muebles.
contrayentes, en vista de haber cumplido con las for «Tales son las reflexiones que he creido deber pre
malidades legales, creen haber adquirido el derecho sentar al gobierno francés por vuestro órgano. Todo
de obligar á los curas á consagrar su matrimonio con lo espero de la equidad, de la discrecion y sentimien
su presencia , aun cuando las leyes de la Iglesia se lo religioso que anima al primer consul. La Francia le
opusieran á ello. es deudora de su vuelta á la fé; no dejará su obra im
«Semejante pretension contraría abiertamente la erfecta y escuirá de ella todo cuanto no esté con—
autoridad que Jesucristo ha concedido á su Iglesia, y orme con los principios y usos adoptados por la Igle
hace á la conciencia de los fieles una peligrosa vio sia. Vos secundareis con vuestro celo sus intenciones
lencia. Su Santidad, conforme con la instruccion y benévolas y sus esfuerzos. La Francia bendecirá de
los principios que estableció respecto á Holanda uno nuevo al primer consul, y aquellos que calumniasen
de sus predecesores, no podria ver sino con senti el restablecimiento de la religion católica en Francia
miento semejante orden de cosas. Tiene una íntima ó murmurasen contra los medios adoptados para su
confianza en que los negocios se restablecerán en aten egecucion, serán reducidos para siempre al silencio.
cion á estas consideraciones en Francia bajo el mismo
pié en que se hallaban anteriormente, y tales como se «París 18 de agosto de 1803.
practican en los demas paises católicos; los fieles, en
todo caso, se verán obligados á observar las leyes de «J. B. CARDENAL CAPRARA.»
la Iglesia, y los pastores deben gozar de la libertad
de adoptarlas como regla de su conducta, sin que se El decreto de 28 de febrero de 1810, que modifi
pueda, acerca de un objeto tan importante, violentar có algunas de las disposiciones contenidas en los ar—
sus conciencias. El culto e la religion cató— tículos, llamados orgánicos, dista mucho de haber he
lica, que es el del cónsu y el de la inmensa mayoria cho justicia á todas las reclamaciones elevadas en este
de la nacion, espera de la sabiduría del gobierno tales precioso documento, que es la mejor refutacion de
actos de justicia. unas pretensiones invasoras y de los falsos sistemas,
«Su Santidad vé tambien con sentimiento que se que las tradiciones parlamentarias han acreditado en
quitan á los eclesiásticos los libros de asiento del es— Francia. Véase EsTEBANisTAs.
tado civil , no llevando otro objeto esta providencia,
que el de hacer á los hombres estraños á la religion Arto irlta s. Véase MoNTANISTAs.
en los tres instantes mas importantes de la vida; el
nacimiento, el matrimonio y la muerte. Espera que Aruspice. Véase DiviNA cioN ó ADivINACION.
el gobierno devolverá á los libros de asientos que se
¿ en poder de los eclesiásticos la consistencia le 34 Arzobispado.(Derecho eclesiástico). Voz que
gal de que gozaban anteriormente. El bien del esta— se usa en diferentes sentidos: por la diócesis de un ár
do lo exige casi tan imperiosamente como el de la zobispo; es decir, por la estension de pais sujeto á su
religion. jurisdicion, pero que compone solo una diócesis; y
«Art. 61. No es menos aflictivo el ver á los obispos asi se dice en este sentido que tal obispado fué erigi
obligados á concertarse con los prefectos para la erec— do en arzobispado ó que lal arzobispado contiene tal
cion de las ayudas de parroquia. Solo los obispos de número de parroquias: 2.” se toma por una provin
ben ser los jueces de las necesidades espirituales de los cia eclesiástica compuesta de una silla metropolitana
fieles. Es imposible que un trabajo combinado de es y varios obispos sufragáneos; como por ejemplo, el ar
te modo por dos hombres, con demasiada frecuencia zobispado de Sens, en el que la Iglesia metropolitana y
divididos en principios, ofrezca un feliz resultado, los primada de Sens tiene por sufragáneos los obispados de
proyectos del obispo serán contrariados, y como de Auxere, de Troyes, de Nevers y el obispado titulado
rechazo, el bien espiritual de los fieles se resentirá de Betlem ; 3." se entiende por el palacio arzobispal ó
de ello. corte eclesiástica de un arzobispo; asi se dice, han
«El art. 7, quiere que los inmuebles, ademas de mandado á tal eclesiástico al arzobispado, ó se ha ci
les edificios destinados á los alojamientos y los jardi tado tal ó tal materia en el arzobispado ó palacio arzo
nes contiguos, no puedan ser destinados para títulos bispal: ....º se llaman las rentas temporales del ar—
eclesiásticos, ni poseidos por los ministros del culto zobispado; asi, el arzobispado de Toledo pasa por el
rn razon de sus funciones. ¡Qué contrastelan sorpren mas rico del mundo.
dente entre este artículo y el séptimo relativo á los Segun unalista, que parece bastante esacta, secuen
ministros protestantes Estos no solamente gozan de tan hoy en la Iglesia católica ciento tres arzobispados;
 ARZ 172 ARZ
á saber: catorce en Italia, contando ¿ de la potestad real, como
la Santa Sede; nas prerogativas
diez y nueve en Francia con el de Aviñon; veinte y la de ser patrono de un obispado, asi como lo fue del de
cuatro en Nápoles y Sicilia; tres en Cerdeña; uno en Rochester; creaba caballeros y acuñaba moneda. Es
Saboya; once en Portugal y España; cinco en Ale— todavia el primer Par de Inglaterra; se sienta inme—
mania; uno en Bohemia; dos en Hungría; uno en los diato á la familia real, y preside á todos los duques y
Paises-Bajos, y dos en Polonia. La Grecia, la Dalma grandes oficiales de la corona. Segun el derecho de la
cia y la Albánia tienen once; el Asia tres, y la Amé nacion, depende de su tribunal la comprobacion de los
rica seis. Las Iglesias reformadas han conservado nue testamentos; tiene poder para conceder cartas de ad
ve: dos en lnglaterra, cuatro en Irlanda, uno en Sue ministracion, licencias ó privilegios, y dispensas en
ciaE dos en Dinamarca y Noruega.
todos los casos que se acudia antes á la corte de Roma,
n Francia, el arzobispado de París es el mas dis no siendo contrarias á la ley de Dios. Tiene tambien
linguido, por ser la capital del reino; pero algunos muchos tribunales de justicia, tales como el tribunal
otros lo son aun mas por una preeminencía aneja á su de las arcas, el tribunal de la audiencia, el de la pre
silla. El arzobispo de Leon goza los derechos de pri rogativa y el de las parroquias privilegiadas.
macía sobre las metrópolis de París, Tours, Sens y sus El arzobispo de Yorck tiene los mismos derechos
sufragáneos. El de Bourgestiene la calidad de primado en suprovincia que el arzobispo de Cantorbery: igual
de Aquitania, y la ejerce en la metrópoli de Albi y sus mente preside á todos los duques que no son de la fa
sufragáneos: el de Burdeostambien lo mismo, y la ejer milia real, y, á los ministros de estado, escepto al gran
ce sobre el arzobispado de Auch. Hay otros arzobispos Canciller del reino; y tiene los mismos derechos de un
que se arrogan la cualidad de primado sin ejercer nin conde palatino sobre el Examhyre.
gunas funciones fuera de sus provincias. Tal es el ar— La palabra arzobispado no se conoció en occidente
zobispo de Sens, que la tiene de primado de Germa hasta el reinado de Carlomagno; y si se ha usado an
nia; el de Narbona, que toma el título de primado de tes, solo fué para designar con ella las grandes sillas
la Galia Narbonense; el de Reims se nombra primado episcopales, sin que les atribuyese ninguna especie de
de la Bélgica y legado de la Santa Sede; el de Viena jurisdicion, en vez de que ahora lleva consigo este
se titula primado de los primados; y en fin, el arzobis título el derecho de presidir al concilio provincial; y
¿ de ¿ se califica legado de la Santa Sede. Pero su provisor conoce de las apelaciones simples de las
os títulos de legados que toman los arzobispos de Arlés causas sentenciadas por los provisores de sus safragá
y de Reims no les dan derecho para ejercer las funcio neos. (Estracto del Diccionario de Jurisprudencia.)
nes de tal; el de Reims solo tiene la venlaja de que le
den escelencia los que quieran hacerle este obsequio. X& Arzobispo. (Derecho eclesiástico). Llámase
La calidad de primado de las cuatro provincias leo asi un prelado metropolilano que tiene varios obispos
nesas le fué dada por la primera vez al arzobispo de sufragáneos, y es el gefe de ellos; en una palabra, es el
Leon por S. Gregorio VIl en 1109, no como un dere primero de los obispos de una provincia eclesiástica.
cho nuevo sinocomo una consecuencia de los derechos S. Atanasio parece que fue el primero que empleó la
que le habian pertenecido siempre. Los arzobispos de denominacion de arzobispo con el obispo de Alejan
Sens se opusieron á ella largo tiempo; y solo despues dría; pero si el título es del siglo IV, la dignidad y
de la reunion de la ciudad de Leon á la coronade Fran la jurisdicion tienen un origen mucho mas antiguo.
cia en tiempo de Felipe el llermoso, en 1312, fue cuan La Escritura y la tradicion nos enseñan que los após
do se le acordó la primacia á este sobre el de Sens por toles y sus discípulos han residido en las grandes ciu
el tratado que se hizo entre el rey y la ciudad de Leon. dades, desde las cuales enviaban otros obispos á las
El arzobispo de Rouen no ha reconocido nunca la pri inferiores. Estas consideraban á las primeras como á
macía del de Leon, apesar de los esfuerzos de los arzo sus matrices; en el gobierno político ya se las daba el
bispos de dicha ciudad; antes bien se le mantuvo en nombre de metrópolis, y los obispos que residian en
esta independencia por un decreto del Consejo de 12 ellas se llamaron tambien metropolitanos.
de marzo de 1702, registrado en los parlamentos de La Iglesia fundada en tiempo de los emperadores
París y de Rouen; de suerte que dicho metropolitano romanos siguió siempre la division de las provincias
ha quedado en la posesion de no depender mas que de aquel imperio; los obispos establecidos en las ciu
de la Santa Sede. Hay algunos cánones que atribuyen dades mayores ó metrópolis tomaron insensiblemen
la calidad de primados á los metropolitanos que de te el título de metropolilanos y arzobispos, como que
pendeninmediatamente deella, y por esta razon la His tenian en su territorio y jurisdicion á otros obispos.
toria Eclesiástica califica detalalarzobispo de Chipre. Las revoluciones que hubo en el imperio y el estable
En Inglaterra solo hay dos arzobispados, el de Can cimiento de los pueblos del Norte, que repartieron en
torbery y el de York, cuyos prelados se titulan pri tre sí sus provincias, no cambiaron en nada esta di
mados y metropolitanos, con la sola diferencia de que vision. Las ciudades que los romanos habian llamado
el primerose titula primado de toda la lnglaterra, y el metrópolis han conservado casi todas su título y sus
otro simplemente primado de lnglaterra. El arzobispo arzobispos; alguna otra solamente se erigió despues
de Cantorbery tenia en otro tiempo jurisdicion sobre en metrópoli, como París y Albi en Francia.
la Irlanda, lo mismo que sobre la Inglaterra; se le ca La edad y calidades que se requieren para ser ar—
lificaba de Patriarca, y algunas veces alterius orbis zobispo son las mismas que para los simples obispos:
Papaetorcis Britannicipontifeac. Las actas que dima tiene que desempeñar las mismas funciones; está obli
naban de su autoridad se hacian y registraban en su gado como ellos á residir, y no se diferencia de ellos
nombre de esta manera: Anno pontificatus nostri pri mas que en el uso del palium y en la forma de
mo, etc. Era lambien legado nato, y gozaba de algu su confirmacion, pues en lo demas los obispos tienen
 AlZ 173, - All/
la plenitud del sacerdocio tambien como ellos. Los ar veerlos. Cada metropolitano debe nombrar un proví
zobispos tienen, sin embargo, por su cualidad de me sor para juzgar de las apelaciones de las sentencias
tropolitanos una preeminencia de honor sobre los obis pronunciadas en los tribunales de los obispos de las
pos de sus provincias. Asistian antiguamente á las provincias. Este debe tener las cualidades que se re
elecciones de sus sufragáneos; confirmaban á los que quieren por los cánones y las sinodales para los pro
hahian sido electos, y los consagraban despues de ha - visores de los obispos; es á saber: que sea presbítero
berles prestado el juramento de obediencia. Por falta nacido ó naturalizado en el reino; que tenga el grado
de uso han abandonado el derecho de visitar las igle de licenciado en derecho ó en teología, y que no sea
sias de sus provincias: sin embargo, no se les puede consejero de ninguna jurisdicion real. El arzobispo
oponer sobre este último artículo mas que la prescrip puede revocarle cuando lo juzgue á propósito sin es
cíon, porque no hay ley alguna que los haya despo— presar la razon, con la obligacion de registrar la revo
jado de esta prerogativa aneja á si dignidad. Los ar— cacion por el secretario de registros eclesiásticos de su
zobispos pueden celebrar de pontifical en todas las diócesis.
iglesias de su provincia y ponerse el pallium ; llevar Cuando la provincia metropolitana comprende en
delante de sí la cruz arzobispal, como que es la señal la estension de su distrito diferentes parlamentos, el
de su autoridad; pero en ningun caso pueden ejercer la arzobispo debe nombrar un juez metropolitano que
potestad de órden en la diócesis de su sufragáneo, sin resida en la metrópoli, y otro situado en un pueblo de
permiso de él. Pertenéceles el derecho de convocar, la parte de la provincia sometida á otro parlamento
de acuerdo con el rey, el concilio de los obispos de su distinto de aquel en donde reside la metrópoli. -

provincia, señalar el sitio en donde se ha de celebrar, En las iglesias que tienen el título de primadas, co
y presidirlo. Convocan tambien las juntas provinciales mo las de Leon y de Bourges, el juez metropolitano
ue se celebran para nombrar los diputados que han juzga no solamente las causas de apelacion de todas las
e asistir á las juntas generales del clero, designan el diócesis sufragáneas, sino aun de las apelaciones in—
lugar y el tiempo de las juntas particulares, y las pre lerpuestas al juez diocesano. El provisor de la prima
siden. Segun la costumbre que se ha conservado en la da decide las apelaciones de las sentencias que se han
Iglesia de Francia, se les deben dirigirá los arzobispos pronunciado por el provisor metropolitano. Se funda
las bulas del jubileo para que las envien á sus sura esta máxima en una costumbre conslante é inmemo
gáneos. Los que tienen molivo de queja por los regla rial; pero se debe confesar que es muy difíciljustificarlo
mentos de sentencias dadas por los obispos, vicarios segun los principios del derecho, aunque muchos au
generales ó provisores, tienen que acudir al arzobispo, tores se han esforzado en probarlo. Lo mas interesante
ya sea por lo que pertenece á la jurisdicion volunta que han dicho es, que consiste aquella en sostener que
ria, ya á la contenciosa. Los metropolilanos no pueden cada uno de los provisores juzgue y pronuncie segun
conocer en primera instancia de los negocios, cuya los límites de sus facultades: el primero, como que re
decision pertenece á los obispos, aun cuando los inte— presenta al obispo diocesano; el segundo al metropo
resados en el negocio consientan en ello, porque a na litano, como juez en primer grado de apelacion, y el
die le es permitido sustraerse de la jurisdicion ordi tercero al primado que le ha constituido para las cau
naria y trastornar el órden público de las jurisdicio sas devuellas á la primada. Pero como se hallan reu
nes. Como los cabildos ejercen la jurisdicion episcopal nidas en una sola persona las circuntancias de obispo,
en Sede vacante, los arzobispos no pueden conocer de de metropolitano y primado, y el tribunal del provi
asuntos eclesiásticos en las diócesis vacantes, mas que sor es el mismo que el del obispo, parece estraño ape
en caso de apelacion de lo que hayan decidido los lar del provisor diocesano de un arzobispo á un juez
provisores ó gobernadores del cabildo o este pleno. metropolitano, y de su iuez metropolilano al provisor
Cuando el obispo se descuida en conferir los benefi del primado; porque seria lo mismo que apelar del
cios despues de los seis meses de vacante que le estan obispo al obispo mismo. Solo por una abstraccion, ó
concedidos por el concilio de Letran para proveerlos, como dicen los canonistas intellectus consideratione, se
bien sea que el beneficio pertenezca a la libre colacion dividen en el obispo, metropolitano y primado estos
del obispó, ó que lo debiese conferir por derecho de diferentes grados de jurisdicion, haciéndolos tribu
devolucion, toca al metropolilano el proveerlos en los nales diferentes
seis meses siguientes al dia en que el obispo pudo li Aunque esta jurisprudencia ofrezca inconvenientes,
bremente disponer de ellos y se descuidó en hacerlo. se ha conservado, porque se pueden obtener tres sen
Si este confiriese un beneficio antes que espirasen los tencias conformes con menos gastos. El provisor de un
seis meses del obispo, la provision seria nula de dere metropolitano no puede proceder contra los obispos
cho, y la neglijencia del obispo no puede hacerla váli sufragáneos cuando se trata de correccion y disciplina
da. Tambien proveen piezas eclesiásticas en los gradua eclesiástica; solo el arzobispo en persona es el que de
dos en el caso que haya injusticia de parte del obispo. be conocer de estas causas como superior inmediato;
Los vicarios generales de los arzobispos, como que lo cual se ha establecido asi por respeto al carácter
representan al prelado que les tiene confiada su auto episcopal. Cuando han fallado á esla regla, los parla
ridad por lo perteneciente á la jurisdicion voluntaria, mentos lo han declarado como un abuso.
ueden conceder testimoniales cuando los obispos las Los arzobispos no pueden ejercer funcion alguna
an rehusado sin razon, conceder dispensas y ejercer arquiepiscopal antes de haber recibido del Papa el
los demas actos de la jurisdicion voluntaria en el caso palio. En su orígen era este un distintivo de honor con
de apelacion, y también conferir los beneficios vacan que Constantino agració al Papa y á los patriarcas de
tes por devolucion, si el arzobispo les ha espresado, es. 0,iente, segun dicen muchos literatos. Los emperado
pecialmente en su nombramiento, el derecho de pro res permitieron despues que lo llevasen todos los obis
T() M0 l. 28
 ASC , i74 ASC

os griegos. Pero en Occidente, los Papas, que eran y una multitud de discípulos aseguraron que habían
os únicos que tenian este derecho, se lo concedieron a visto á Jesucristo resucitado elevarse al ¿ v der
los arzobispos, y aun tambien á algunos obispos. Al ramaron su sangre por sellar la verdad de su testi
principio lo hicieron con el permiso de los emperado monio. La apoleosis de Rómulo no habia sido ni pre
res; pero despues no cesaron de él, porque se creyeron vista ni predicha; so'o fue imaginada para alejar la
con este derecho. Procuraron persuadir á los obispos sospecha de un regicidio cometido por los senadores:
que sin esta condecoracion no podian ejercer los dere la resurreccion y la ascension de Jesucristo habian sido
chos de su potestad y jurisdición; y aun S. Gregorio VII anunciadas por los profetas y por él mismo; estos dos
quiso obligarlos á que fuesen á pedirla á Roma en per prodigios han fundado el cristianismo. Se podia creer
sona. El palio es una faja de lana blanca compnesta del sin consecuencia, ó no creer la fábula de Rómulo; mas
vellon de dos corderos mantenidos y apacenlados por no se podia ser cristiano sin creer la resurreccion y la
unos subdiáconos apostólicos, y esquilados por ellos ascension de Jesucristo profesadas en el símbolo, y no
mismos. Dicha faja tiene tres cruces negras, y está se podia abrazar el cristianismo sin esponerse al odio
pegada á una especie de collar que se pone sobre los ¿ judios y de los paganos. Nadie tuvo interes en
hombros formando dos estremos colgantes de casi un disputar acerca de la divinidad de Rómulo, pues que
pie de largo, á los cuales eslan pegadas unas planchi se conciliaba muy bien con el sistema del paganismo;
tas de plomo redondas, cubiertas de seda y de cuatro por el contrario los judios tuvieron un interes muy
cruces encarnadas. El palio debe estar tocado á los grande en demostrar la falsedad de la narracion de los
cuerpos de los santos apóstoles S. Pedro y S. Pablo. apóstoles, y para adoplarla era preciso renunciar al
Es el símbolo de la plenitud del sacerdocio, de la inde judaismo ó al paganismo. La fábula de Rómulo no pu
pendencia del arzobispo, y de la dependencia de sus do servir mas que para hacer á los romanos ambicio
sufragáneos. El acto de remitírselo es una especie de sos, usurpadores y enemigos del universo entero; la
confirmacion de los derechos de los metropolitanos; es creencia de la divinidad de Jesucristo ha desterrado
tan personal al arzobispo que le ha obtenido, que se le del mundo las locuras, la impiedad, los crímenes del
dejan despues de su muerte, revistiéndole con él an paganismo, y ha establecido el reinado de la verdad y
tes de darle sepultura. Cuando el Papa se lo envia á un ¿?
tables.
virtud. Ved aqui unas diferencias incontes
arzobispo, no sirve mas que para la Iglesia donde está
nombrado; de suerte que si lo trasladan á otra silla me
tropolitana, tiene que pedir ºtro nuevo. (Estracto del Aseetas. Voz tomada del griego askeres, que
Diccionario de Jurisprudencia). significa á la letra una persona que se ejercila en āl
guna cosa, que trabaja. Se dió en general este nom
Ascension. Se dice propiamente de la elevacion bre á todos aquellos que abrazaban un género de vida
milagrosa de Jesucristo cuando subió al cielo en cuer mas austera, y que por lo tanto se ejercilaban mas
po y alma en presencia y á vista de los apóstoles. en la virtud ó trabajaban con mas eficacia para
Tertuliano hizo una enumeracion sucinta de los di adquirirla que el comun de los hombres. En este sen
ferentes errores que se enseñaron sobre la ascension tido, los esenios entre los judios, y los pitagóricos
del Salvador. entre los filósofos, podian llamarse ascetas. Entre los
Los apelitas creyeron que Jesucristo dejó su cuerpo cristianos, en los primeros tiempos se daba el mismo
en los aires (S. Agustin dice que pretendian que esto título á todos los que se distinguian de los demas por
se verificó sobre la tierra), y que subió sin cuerpo al la austeridad de sus costumbres y se abstenian, por
cielo: como Jesucristo no habia traido un cuerpo del ejemplo, del vino y de la carne. Desde que la vida mo
cielo sino que lo habia recibido de los elementos del nástica se tuvo por honrosa en el Oriente y considera
mundo, sostenian que al volver al cielo, lo habia res da como mas perfecta que la vida comun, se conservó
tituido á estos elementos. el nombre de ascetas entre tos monges, y particular
Los seleucianos y los hermianos creian que el cuer mente se adaptó á los que se retiraban á los desiertos y
po de Jesucristo no subió mas alto que hasta el sol, en no tenian otra ocupacion que la de egercitarse en la
donde quedó como depositado. Se fundaban sobre este meditacion, en la lectura, en los ayunos y demás
pasage de los salmos: ha colocado su tabernáculo en mortificaciones. Se dió tambien este título á unas reli
sos. Gregorio Nacianceno atribuye la misma opi giosas; en consecuencia se ha llamado asceteria á los
nion á los maniqueos. monasterios, pero sobre todo á ciertas casas en las
El dia de la ascension es una fiesta celebrada por que habia religiosos y acólitos, cuyo oficio era el de
la Iglesia diez dias antes de Pentecostés, en memoria enterrar á los muertos. Los griegos dan generalmen
de la ascension de Nuestro Señor. Segun S. Agustin, te el nombre de ascetas á todos los monges, tanto á los
Epist. 118 n. 1, fue instituida esta festividad por los anacorelas y solitarios, como á los cenobitas.
mismos apóstoles. Está mandada su celebracion por M. de Valois, en sus notas sobre Eusebio, y el P.
las constituciones apostólicas, l. 8, c. 3; Thomassino Pagi, observan que en los primeros tiempos, el nom
Tratado de las fiestas, p. 370. bre de ascetas y el de monges no eran sinónimos
Algunos incrédulos modernos compararon malicio Siempre hubo ascetas en la Iglesia, y la vida monástica
samente la ascension de Jesucristo á la apoteosis de no comenzó á considerarse como honorífica sino en el
Rómulo para insinuar que la una no está mejor pro siglo IV. Bingham hace notar muchas diferencias en—
bada que la otra. Segun la historia romana, un solo tre los monges antiguos y los ascetas; por ejemplo,
hombre dijo que Rómulo se le habia aparecido y le ha que estos últimos vivian en las ciudades, y que ha
bia asegurado su ascensional cielo. Véase Tito Livio. bia entre ellos personas de toda condicion, aun clé
Nada arriesgó en inventar esta fábula. Doce apóstoles rigos, y que no seguian otras reglas particulares que
 ASC. 175) ASC
las leyes de la Iglesia en vez de que los monjes vivian apóstoles, fué cuando el cristianismo comenzó á cor
en la soledad: eran todos legos ál menos en los prin– romperse, llegando á ser un caos de errores y de su
cipios y sujetos á las reglas ó constituciones de sus persticiones; los mismos discípulos de los apóstoles
fundadores. De aqui es que se llamó vida ascética á la fueron los que prefirieron á la doctrina de sus maes
que observaban los cristianos fervorosos. tros la de los filósofos paganos, y los que hicieron
Consistia esta, segun M. Fleury, en practicar volun dominar esla última en la Iglesia. Asi es como Jesu
tariamente todos los ejercicios de la penitencia. Los cristo ha cumplido la promesa que habia hecho de es
ascetas se encerraban comunmente en ciertas habita tar con su Iglesia hasta la consumacion de los siglos.
ciones ó celdas, en donde vivian en el mayor retiro, Cuando se considera este sistema de los protestantes,
guardando la continencia, y añadiendo á la frugali se nos ocurre la idea de preguntarles si creen en Je—
dad cristiana unas abstinencias y ayunos estraordina sucristo.
rios. Practicaban la xerofagia ósea el uso de alimen En la palabra CoNsEJos Ev ANGELIcos haremos ver
tarse con pan y frutas secas, y los ayunos de dos, tres que la distincion que los primeros cristianos hicieron
ó mas dias seguidos; se egercitaban en llevar el cilicio, de estos y de los preceptos, no fué una quimera por
en andar descalzos, en dormir sobre el suelo, velar parte suya, y que el mismo Jesucristo la hizo; que él
una gran parte de la noche, leer de conlínuo la Sagra es quien dijo, que hay alguna cosa mas perfecta, que
da Escritura, y orar sin cesar cuanto les era posible. lo que se prescribe ú ordena á todos los hombres, y
Tal era la vida ascética: grandes obispos y famosos que haciéndolo, puede merecerse una recompensa
doctores, entre otros Orígenes, la observaron. Llamá mayor. Vamos á probar aquí que aun el mismo Jesu
base por excelencia á los que la practicaban, los esco cristo es quien dió el ejemplo de la vida ascética, y
gidos entre los escogidos, EKLERToN ERLEktotERov. que sus apóstoles la practicaron como él; no tuvieron
Clemente Alejandrino, Eusebio, His, l. 6. c. 3; pues necesidad los cristianos de ir á buscar el modelo
Fleury, costumbres de los cristianos, 2." parte, n. 26; entre los filósofos paganos, ni entre los esenios ó ju
Bingham, Orig. eccles. lib. 7, c. 1, S. 6. dios terapéutas.
Concíbese que la vida ascética tal como acabamos Jesucristo alabó la vida solitaria, penitente, cas
de describirla, no podia dejar de desagradará los pro la v mortificada de San Juan Bautista, Mat., c. 11,
testantes, y que tienen un interés decidido en hacerla y. 8, vida ascética en el mas alto grado; el mismo
considerar como un efecto del entusiasmo de algunos Jesucristo practicó la castidad, la pobreza, la morti
cristianos mal instruidos. Este método de vida fué ficacion, el ayuno, la renuncia de todo y la oracion
segun su opinion un error capital, un sistema estrava contínua; todo esto sin embargo no se ha mandado á
ganle que ¿ causado en todos los siglos los mas gran todos los hombres: se nos persuadirá por ventura, que
des males á la Iglesia. Se distinguió, dice Mosheim, la hay entusiasmo y locura en querer imitar á Jesucris
observancia de los preceptos que Jesucristo estableció to? Dice que hay hombres que se han hecho eunucos
para todos los hombres de la de los consejos á que para alcancar el reino de los cielos. Mat., c. 19,
exhortó solamente á algunas personas, se lisongearon y. 12, llama bienaventurados á los que lloran; pre
con elevarse por la práctica de estos á un grado su— dijo que sus discípulos ayunarian cuando estuvieran
perior de virtud y de santidad y de gozar de una union privados de su presencia; les promele el céntuplo,
mas íntima con Dios. En esta persuasion, muchos cris porque dejaron todo por seguirle, c. 5, y 5; c. 9,
tianos del II siglo se prohibieron el uso del vino, de y. 15; c. 19, y.29. Solo falla á los protestantes, que
la carne, del matrimonio y del trato con sus seme se unan á los incrédulos, y digan como ellos, que Je
Jantes; estenuaron sus cuerpos con las vigilias, la abs sucristo era de un carácter austero, importuno, y
tinencia, el trabajo y el hambre; marcharon despues melancólico, como los egipcios, que habia sido edu
á buscar la felicidad en los desiertos, lejos de la so cado entre los esenios, y que se habia imbuido de su
ciedad de los hombres. Esta estravagancia del enten moral atrabiliaria; que el cristianismo, tal como lo
dimiento pareció nacida de dos causas: la primera fué habia predicado, no es propio sino para los monges.
la ambicion de imilar á los filósofos platónicos y pita Tambien tendrán que dirigir la misma acusa
góricos, cuyas locas ideas describió Porfirio en su tra cion á S. Pablo: «Castigo mi cuerpo y le repri
tado de la abstinencia; la segunda fué la melancolia mo, temiendo perder el camino de la salvacion,
¿ inspira naturalmente el clima del Egito, enferme que enseño á otros, y quedarme entre los réprobos.»
íº discípulos
ad de que estaban afectados los esenios y terapeulas, ros Cor., c. 9,de
y.27. «Los que se muestran verdade
Jesucristo, no solo no siguen los im
que habian observado ya ese método de vida triste y
lúgubre largo tiempo antes de la venida de Jesucristo. pulsos de la carne, ni se emplean en sus obras, sino
De aqui dice pasó esta costumbre á la Siria y á los pai que la tienen crucificada y reprimida con todos sus
ses prócsimos cuyos habitantes tienen con corta dife vicios y malos deseos.» Gal, c. 3, y. 2. Mostrémo
rencia el mismo temperamento que los egipcios; y des nos dignos ministros de Dios, por la paciencia, por las
pues infestó aun á las naciones europeas: tal fué el ori tribulaciones, por el trabajo, por las vigilias y por
gen de los votos, de las mortificaciones monásticas, del los ayunos, etc. 2." Cor., c. 6, y. . Tambien alabo
celibato de los sacerdotes, de las penitencias infruc la vida pobre, austera y penitente de los prolelas.
tuosas, y de otras supersticiones que han manchado la Her. c. 11. y. 37. En vano hemos buscado en los
belleza y la sencillez del cristianismo. Historia ecle comentadores protestantes esplicaciones y subterfu
siástica del segundo siglo, segunda parte, c. 5, S. 11 y gios para esquivar las consecuencias de estos pasajes,
ºig. Este es el lenguaje de todos los protestantes. pero no los hemos hallado, por lo que nos veremos
Asi, segun su opinion, desde el segundo siglo é in recisados á repetir las mismas pruebas en las artícu
mediatamente despues de la muerte del último de los os AnsTINENCIA, CELIBATo, Ayu N0, MoRTir ICAClon,
 SC s.
ASE
176
MoNGEs, Voro, etc. porque los protestantes han vitu gando hasta á dudar si los Padres de la Iglesia lo con
perado todas estas prácticas con la misma obstina cebian mejor. Hist. del Maniq., l. 3. c. 3, S. I. Po—
cion y siempre sin fundamento. co nos imporla saber si los antiguos filósofos racioci
Mas se lisongean creyendo responderá todo con un naban mal; sin embargo, Mosheim, en su Disert. so—
solo pasaje de S. Pablo, que dice á Timoleo, en la bre la creacion, ha citado un pasaje de Hierocles, que
Epist. 1.º, ad. Tim., c., y. 7 y 8. «Egercítale en prueba, que este platónico comprendia muy bien las
las obras de piedad; pues el egercicio corporal es muy consecuencias de la a seidad. En cuanto á los Padres
útil para conservar la salud y aumentar las fuerzas de la Iglesia, Tertuliano en su libro contra Hermóge.
del cuerpo; mas el ejercicio que se hace practicando nes, c. , y sig., raciocinó constantemente sobre el
obras de piedad, es muy útil y premiado, no solo en principio que acabamos de establecer y le desenvol
esta vida presente sino tambien en la venidera.» La vió como un profundo metafísico. El mismo Beauso—
cuestion estriba en saber, si por ejercicios corporales, bre citó un pasaje de S. Dionisio de Alejandría, que
entiende el apostol la oracion, el trabajo, las vigilias, prueba que este obispo pensó como Tertuliano. El que
ayunos, etc., que recomendaba á los fieles: en cuyo Beausobre alega de S. Agustin nada concluye y se le
caso incurriria en una grosera contradiccion, y pre podrian citar otros veinte sobre esta materia, en los
guntariamos ademas qué debemos entender por eger cuales el santo doctor establece, que el ser es el carac
citarse en las obras de piedad, Por nuestra parte, co ter propio de Dios, que en él el ser ó la esencia inclu
mo tememos colocar á S. Pablo en contradiccion con ye toda perfeccion, que ninguna perfeccion se distin
sigo mismo, creemos que por los ejercicios corporales, gue de su esencia, etc. .
entendió la carrera, la lucha, el pugilalo en que se Es preciso no confundir, como lo hizo Spinosa el
egercitaban los antiguos, el juego del disco, y demas ser que ecsiste por sí mismo, per se, sin tener necesi
egercicios violentos de que gustaban los griegos y ro dad de un sugeto, ó de un supuesto en quien subsis
manos y usaban muy frecuentemente; y que egerci— ta, con el ser que ecsiste de sí mismo, á se, sin tener
tarse en las obras de piedad, es ocuparse en la oracion, causa alguna de su ecsistencia; el primero de estos
en la meditacion, en la lectura, en alabanzas divi— caractéres es propio de toda sustancia, el segundo
na, vigilias y ayunos, como lo recomienda el apóstol, no conviene mas que al ser necesario que es Dios,
y como la practicaban los ascetas de la primitiva Sobre esta confusion de términos es sobre la que Spi
Iglesia: sostenemos que estos egercicios forman parte nosa funda su paradoja, donde asegura que en el
de la verdadera piedad, á la que Jesucristo prometió universo no hay mas que una sola sustancia, que es
las recompensas de la vida presente y de la futura. el todo.
Mat. c. 19, y.29. a S" Aunque la naturaleza y esencia de Dios no
pueden esplicarse por el uaje humano, espresion
Ascitas, Asco drugitas, Asco dirupitas, de una capacidad pequeña, limitada é infinitamente
Ascodruatas. V. MoNTANISTAs. distante de la suma perfeccion de Dios, sin embargo
han tratado los teólogos de investigará su manera;
Ascidad, término facticio, derivado del latin y alendidos los alcances de la humana inteligencia,
ens á se, ser que ecsiste por sí mismo, por la necesi en cual de las perfecciones ó atributos divinos deba
dad de su naturaleza. Este atributo no conviene mas colocarse el constitutivo de la esencia de Dios. Y
ue á Dios, quien se la atribuyó á sí mismo, cuando partiendo lodos del reconocido principio de S. Agus
¿ «Yo soy, el que soy. llé aqui, añadió, lo que dirás
á ¿ hijos de Israel: El que es, me ha enviado á vos—
iin: Deus ineffabilis est; facilius dicimus, quid Deus
non sit, quam quid sit, se dividió la escuela teológica
otros.» Eacod... c. 3, y. 1. De este atributo de Dios en cuatro opiniones. Es la primera la llamada de los
se derivan todos los deinas. En efecto, ninguna cosa hominales, cuyo autor fué Guillelmo Occam (llamóse
limitada ecsiste sin causa; luego el ser necesario que le doctor invencible), y ponia la esencia de Dios en el
ecsiste de sí mismo no tiene causa alguna; él mismo cúmulo de todas las perfecciones; la segunda la de
es la causa de todo cuanto ecsiste fuera de sí: por los Escotistas, que colocaban la esencia divina en la
consiguiente, no se le puede suponer privado de nin infinidad radical, ó en la eacigencia de todas las per
guna perfeccion, y ninguna de las perfecciones que le fecciones; la de los Tomistas, entre los cuales hay al
ertenecen por necesidad de naturaleza, puede ser gunos que señalan como constitutivo de la esencia
imitada. La razon porque todo ser creado tiene lími de Dios la inteleccion radical, ó facultad de entender;
tes, es porque el creador ha sido dueño para darle y mas generalmente la inteleccion actual; y por últi
el grado de perfeccion que le plugo: de aqui procede mo la que lleva Bergier y es seguida comunmente
la desigualdad de los seres creados. Por consiguiente por los teólogos, que consiste en considerar como
los teólogos consideran la aseidad como la esencia constitutivo de la esencia divina la aseidad, ó la om
de Dios, como el atributo que le distingue eminente nímoda independencia.
mente de todos los demas seres. Por lo cual se de Esto supuesto, y requiriéndose para el constitutivo
muestra tambien, contra los materialistas, que la ma de alguna esencia: 1.º que sea lo propio de la cosa
teria no es un ser necesario, elerno, y ecsistente de
que constituye; 2.º que sea lo primero y lo que de
sí mismo, pues que tiene límites, y porque ademas nada se derive; 3.º que sea fuerte y origen de las de
no está ciertamente dolada de una total perfeccion. mas propiedades; ...º que sea adecuado á la cosa que
A pesar de la evidencia de este raciocinio, Beauso constituye, de manera que toda la abrace en su con—
bre escribió asegurando que los antiguos filósofos no cepto esencial, parece la mas fundada sentencia aque
lo concebian; que, segun su opinion, la necesidad de lla que coloca la esencia metafísica, ó el constitutivo
ser, ó la eternidad, no incluia toda perfeccion, lle metafísico de Dios en la aseidad. Preguntando Moisés
 ASE 177) AS

quién era Dios, respondió el mismo Señor: Yo soy el dos por el rigor de las leyes, ú oprimidos por la vio
que soy; asi dirás á los hijos de Israel: EL, QUE Es, me lencia de los tiranos. De todos estos asilos, los tem
envió á vosotros: parece pues que Dios esplicó su nom plos eran los mas sagrados é inviolables. Se suponia
bre y esencia por la aseidad, soy el que soy.... EL QUE que los mismos dioses se encargaban de castigar á los
Es.... Esto es, tengo en mí mismo la razon de mi exis criminales que llegaban á colocarse por este medio
tencia, existo necesariamente, el ser por esencia es bajo su dependencia inmediata; y se consideraba, co
mi constitutivo, me es una cosa propia, no conviene mó una impiedad el querer quitarlos el cuidado
ni á las criaturas que dependen del criador, ni á los de la venganza. - -

atributos divinos que emanan de la esencia como de Entre los paganos se concedia asi la impunidad á
su raiz, mi á las personas divinas que tienen un prin los criminales aun los mas culpables, ya fuese por su
cipio: la aseidad, el ser, la propia esencia es lo pri persticion ó bien para poblar las ciudades por este
mero que nos ocurre, es la fuente y origen de todas medio; asi fué en efecto conmo Tebas, Atenas y Roma
las perfecciones; es en fin adecuada á Dios porque for se llenaron de habitantes: prueba bastante sensible
mal o virtualmente contiene cuanto puede decirse de de la multitud de crímenes que se comelian en aquel
la naturaleza divina. tiempo. -

Las dos sentencias de Escotistas y Tomistas, en es Los israelitas tenian algunas ciudades de refugio
pecial la de los últimos que coloca el constitutivo de que el mismo Dios les habia designado; mas estas no
la esencia divina en la inteleccion actual, tiene á su eran un asilo seguro sino para los que habian come
favor muchos y muy respetables teólogos. tido un crimen por inadvertencia, por un caso for
Si estas cuestiones metafísicas fuesen todavia, ó tuido é involuntario, y no para los que se habian he
uizá ahora mas que nunca ridiculizadas, diré á los cho culpables con deliberado propósito.
¿ de la ciencia teológica, que son necesa— Bingham en sus Orígenes eclesiásticos lib. 8, c. 11,
rias en su máxima parte, útiles en gran manera, y S. 3 opina que el derecho de asilo en las iglesias cris
aunque algunas quieran calificarse de vanas sutilezas, tianas tuvo principio en tiempo del emperador Cons
siempre resultará que no han causado en el mundo lantino. Observa que en su origen este privilegio no
los trastornos, desastres y calamidades públicas que la se concedió ni para poner á los criminales al abrigo de
moderna metafísica de los derechos imprescriptibles, las persecuciones de la justicia, ni para disminuir la
de la soberanía popular, de la espresion nacional, y autoridad de los magistrados, ni para eludir las leyes;
de la omnipotencia parlamentaria. sino para ausiliar á los inocentes acusados y perse
guidos injustamente, dejar á los jueces tiempo, para
Asesinato. V. HoMICIDlo. ecsaminar con madurez los casos inciertos y dudosos,
ner los acusados á cubierto de la venganza y vias de
Asfalto, Lago Asfaltico». V. MAR MUERTo. ¿ y últimamente para dar lugar á los obispos
á interceder por los culpables, lo cual hacian con fre
Asiaticos, Asia. Prescindiendo de la adhe— cuencia. No debe pues sorprender el que los suceso
sion pertinaz de los asiáticos á sus antiguas costum res de Constantino confirmaran este derecho de asilo,
bres, se conoce que no fué cosa fácil el hacerles ni que los pastores de la Iglesia le sostuvieran con
adoptar con gusto la moral, cristiana á unos pueblos energia. En las obras de S. Juan Crisóstomo vemos un
tan entregados al lujo y á la molicie. Sin embargo ejemplo notable de esto mismo. Un favorito del em
aquí fue donde el cristianismo se estableció desde lue perador Arcadio, llamado Eutropio, habia sugerido
go y donde hizo rápidos progresos: el Asia menor, la á este príncipe el suprimir el derecho de asilo, y bien
Siria, la Armenia, la Persia, vieron unos prodigios pronto él mismo, en desgracia y perseguido por ene
de virtud, de que ni aun habia idea antes del naci migos poderosos, se vió reducido á refugiarse en una
miento del cristianismo. Casi no es posible convertir iglesia y á buscar su salvacion abrazándose al altar.
al presente á los turcos, que habitan estas mismas Este acontecimiento dió á San Juan Crisóstomo moti
regiones; los paganos debian ser por lo menos tan vo para un discurso muy elocuente sobre la vanidad
viciosos y pertinaces como los mahometanos, Plinio de las grandezas humanas, y sobre la justicia de los
en su carta á Trajano, Luciano en sus diálogos, y Ju— decretos de la Providencia. Op., t. 3, p. 381:
liano en sus cartas, dan testimonio de las virtudes de Cuando los emperadores Honorio y Teodosio arre
los cristianos; lo cual es una prueba de que esta re glaron y moderaron el derecho de asilo, los obispos y
ligion ha obrado igual cambio en las costumbres de los monges tuvieron cuidado de señalar una estension
los pueblos que en su creencia. No se puede decir de terreno que fijaba los límites de la jurisdicion se
otro tanto de ninguna otra religion del universo. cular. Poco á poco los conventos se convirtieron en
una especie de fortalezas donde los criminales se po
Asilo, santuario, lugar de refugio, que pone á un nian á cubierto del castigo insultando á los magistra
criminal al abrigo de las persecuciones de la justi - dos. Este privilegio se estendió despues no solamente
cia. Esta voz trae su origen del griego svLAo que á las iglesias y cementerios,sino tambien á las casas de
significa prender, arrancar ó sacar con violencia, co los obispos; porque no era posible que un criminal
ger. No se podia verificar, sin cometer un sacrile pasase su vida en una iglesia, donde no podia hacer
gio, arrancaró sacar con violencia á un hombre del decentemente muchas de las funciones animales. Pero
asilo en que se habia refugiado. en fin los asilos fueron despojados insensiblemente de
Los templos, los altares, las estatuas de los dioses sus inmunidades porque ya no servian sino para la
6 de los héroes, y sus sepulcros eran entre los anti vorecer el pillage y multiplicar los delitos. -

guos los sitios á que se acogian los que eran abruma No obstante debemos convenir en que si los asilos
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han puesto muchos culpables á cubierto del castigo que ha estado muy largo tiempo en uso en la Iglesia. No se
justamente merecian, han salvado tambien la vida á sabe que se haya practicado la primera, á no ser qui
un gran número inocentes injustamente persegui zá en el caso en que fuese necesario bautizar un gran
dos por los furores de la venganza. En los tiempos número de personas al mismo tiempo. Véase el antiguo
desgraciados en que las venganzas particulares se re Sacramentario por Grandeolas segunda parte, p. 71,
utaban permitidas, cuando no se conocia otra ley que y el artículo PunificAcioN.
a del mas fuerte, era de absoluta necesidad tener lu Los paganos tenian sus aspersiones, á las cuales
gares de refugio contra la violencia de los señores atribuian la virtud de espiar y purificar. Los sacer
siempre armados. Este triste recurso no ha dejado de dotes y los sacrificadores se preparaban para los sa
ser necesario mas que cuando la autoridad de nues crificios por medio de abluciones; esta es la razon
tros reyes, la civilizacion de los pueblos y la jurisdic— porqué habia á la entrada de los templos, y algunas
cion de los tribunales y magistrados han estado sóli veces en los lugares subterráneos, ciertos depósitos
damente establecidas. de agua, en donde se lavaban. Esta ablucion era pa
En Inglaterra habia muchos de estos asilos ó san ra los dioses del cielo; pues por lo que hace á los de
tuarios; el mas nombrado estaba en Biberly con los infiernos se contentaban con la aspersion. Véase
esta inscripcion: Haec sedes lapidea freed stool di AGUA BENDITA.
citur, id est pacis cathedra, ad quam reus fugiendo
perveniens omnimodam habet securitatem. Camden. En Ass ideos ó Hassldeos. Secta de judios lla
Francia la iglesia de S. Martin de Tours ha sido largo mados asi de la voz hebrea hhassidim, justos. Los as.
tiempo un asilo inviolable. Las franquicias concedidas sideos creian necesarias para salvarse las obras de su
á las iglesias en Italia se asemejaban mucho al dere pererogacion; fueron los predecesores de los fariseos,
cho de asilo; pero han sido abolidas. de los cuales salieron los esenios que enseñaban como
Carlo-magno dió el primer paso para la supresion ellos que sus tradiciones eran mas perfectas que la ley
de los asilos prohibiendo que se llevase de comer á los de Moisés.
criminales refugiados en las iglesias. Nuestros reyes Serrario, jesuita, y Drusio, teólogo protestante es
han concluido lo que Carlo-magno habia empezado. cribieron n no contra otro respecto á los assideos, con
Hist. de lº Acad. des Inscript, t. 2, in 12, p. 52; Mem. motivo de un pasage de José hijo de Gorion. El pri
l. 7, p. 6. mere sostuvo, que por el nombre de assideos José en
tiende á los esenios; y el segundo pretendió que ha
Asima. V. SAMARITANo. blaba mas bien de los fariseos. Seria cosa facil el con
ciliar estas dos opiniones observando que assideos fue
Asistencia. Ausilio particular que concede Dios un nombre genérico, dado á todas las sectas de los ju
á un hombre ó á una sociedad para preservarlos del dios que aspiraban á una perfeccion mas elevada que
error. Algunos teólogos creyeron que este ausilio fue la que estaba prescripta por la ley: tales fueron los ci
el que Dios dio á cada uno de los escritores sagrados, neos, los recabitas, los esenios, los fariseos, &c.; poco
para impedir que cayesen en ningun error; todos con mas ó menos del mismo modo que nosotros compren
vienen en que Dios concede esta asistencia á su Iglesia demos al presente, bajo el nombre de religiosos y de
para preservarla del mismo peligro. Esta asistencia cenobitas todas las órdenes é institutos religiosos. Mas
todos los assideos no eran fariseos. Brucker, Hist. de
no es lo mismo que la revelacion y la inspiracion. V.
ESCRITURA SAGRADA. la filos. t. 2, pág. 713.
Asmodal ó Asmodeo. Este es el nombre que Aslacianos. llereges del siglo IX, secuaces de
los judios dan á los príncipes de los demonios, como un tal Sergio, el cual habia renovado los errores de
se puede ver en la parafrasis caldea sobre el eclesiás los maniqueos. Su nombre, derivado del griego, sig
tico, c. 1. Rabbi Elias, en su diccionario intitulado nifica sin consistencia, variables, inconstantes, por
Thisbiºdice que Asmodai el mismo que Samael, que que cambiaban de lenguage y creencia á su capri
toma su nombre del verbo hebreo samad que significa cho. Se creian fuertes con el apoyo del emperador
destruir; y asi Asmodai significa un demonio des Nicéforo, que los favorecia; pero su sucesor Miguel
tructOr. Europalato los reprimió por medio de unos edictos
muy severos. Se cree que estos son los que Teófanes
Asperston., del latin aspergere, rociar. Tal es y Cedreno llaman antiganianos. El P. Goar, en sus
la accion de arrojar el agua á ¿ otra parte con notas sobre Teófanes en el año 803, pretende que
un hisopo ó una rama de algun arbolillo. las turbas de vagos, conocidos en Francia por el
Este término está principalmente consagrado para nombre de bohemios y egipcios eran restos de los asta
cianos; mas esta congetura no se conforma con la
las ceremonias dereligion, para espresar la accion del
sacerdote cuando en la iglesia derrama agua bendita idea que Constantino Porfirogeneto y Cedreno nos dan
sobre los concurrentes; ó sobre las sepulturas de los de esta secta: nacida en Frigia, dominó allí y se es
fieles. La mayor parte de la bendiciones se terminan tendió poco en lo restante del imperio. Los astacianos
por una ó muchas aspersiones. En las parroquias, la unian el uso del bautismo á todas las ceremonias de
aspersion del agua bendita todos los domingos prece la ley de Moisés, y formaban una mezcla absurda de
de á la misa mayor. judaismo y de cristianismo.
Algunos sostuvieron que se debia administrar el
bautismo por aspersion, otros pretendian que debia Astaroth ó Astarté, ídolo de los Filisteos,
administrarse por inmersion, y esta última costumbre que los judios derribaron por mandato de Sanuel:
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tambien era una divinidad de los sidonios, que ado nació Luis XIII se formó su horóscopo con toda la gra
ró Salomon cuando fue arrastrado por sus mugeres á vedad é importancia posible.
la idolatria. De dónde pudo nacer esta demencia? Del mismo
La mayor parte de las etimologias que se han pre origen que el culto de los astros. «Por una vana ima
senlado acerca de este nombre son falsas ó arriesga ginacion, dice el Sabio, los hombres han desconocido
das. M. de Gebelin opina con mas esactitnd que está á Dios en sus obras; se han persuadido que los ele
formado de astar, que en las lenguas orientales sig mentos, los astros que ruedan sobre nuestras cabezas,
nifica un astro; y que asi astarté es la luna, la reina el sol, la luna y los planetas son los dioses que go
del cielo, la divinidad de la noche. Aleg. orien. p. 50. biernan, el mundo». Sap., c. 13, y. 1. Por consi
Entre los hebreos se conocia bajo el nombre de la guiente les atribuyeron un conocimiento y un poder
reina del cielo; entre los egipcios era Isis; entre los muy superiores á los de los hombres. Desde que se
árabes Alyta; los sirios la llamaban Milyta; los per les consideró como los árbitros de nuestros destinos
sas Metra; los griegos Artemis; los latinos Diana. En se debió inferir que podian tambien hacérnoslos co
la Sagrada Escritura Baal y Astaroth están casi siem nocer con anticipacion.
pre juntos como dos divinidades de los sidonios: esto Se ha visto ademas que los astrónomos podian pre
es, el sol y la luna. Cic., de Nat. Deor., lib. 3; Ter—
decir la aparicion detal astro ó de tal constelacion,
tuliano, Apologet.. c. 23, etc. Mem. de l Acad. des el cambio de las estaciones ó de la temperatura
Inscrip., t. 71, in. 12, p. 173. del aire, un eclipse de sol ó de luna; que los diver
sos colores de estos dos astros anunciaban ó el buen
Astarotitas, adoradores de Astaroth ó de la tiempo, ó vientos ó lluvias. Los astrólogos, para
luna. Se refiere que existieron estos idólatras entre
darse importancia, se jactaron de poseer unos cono
los judios desde Moisés hasta la cautividad de Babi—
cimientos aun mas estensos, y poder predecir ciertos
lonia. V. AsTRos. acontecimientos que no tenian conexion alguna con
los fenómenos del cielo: algunas de sus predicciones,
Astero ó Asterio (San), arzobispo de Ama verificadas casualmente, inspiraron á los ignorantes
sea, en el Ponto, muerto poco despues del año 00: una ciega confianza en sus pronósticos. Se sabe hasta
obtuvo un rango distinguido entre los doctores de la qué punto llegó la curiosidad de todos los pueblos,
Iglesia del lV siglo. Existen muchas homilías su y su ansia por conocer lo futuro. Asi se estableció la
as, que los antiguos apreciaron mucho. Fueron pu creencia general de la influencia de los astros so—
licadas por el P. Combeis, Ant. Bibl. Patruum, bre nuestros destinos; la opinion de que los dio
tom. 1, con los estractos de algunas otras tomadas de ses, esto es, los astros animados, revelaban á los ob
Focio. Teofilo Raynaud las habia tambien recogido y servadores del cielo los acontecimientos mas ocultos
hecho imprimir en latin en 1661. en el porvenir. Y pues que los mismos estóicos creian
firmemente en la astrologia, se puede muy bien creer
Astrología judiciaria, ciencia falsa y ab— que los mismos astrológos se engañaron frecuente—
surda, cuyos partidarios pretenden que existe un en— mente por su propia curiosidad. Mem. de lº Academ.
lace necesario entre el curso de los astros y las accio des Inscrip., t. 56. in 12, p. 5. Hé aquí por qué
nes humanas; que por lanlo nuestros destinos estan los caldeos, que son los mas antiguos observado
escritos en la bóveda del cielo; que pueden leerse allí res de los astros, fueron lambien los mas célebres
y anunciarlos de antemano; y que al nacer un niño adivinos de la antigüedad. En el libro de Daniel, c. 2,
se puede formar su horóscopo, preveer y predecir lo y. 2 y 27, los sabios, los magos, los adivinos y los
que será, lo que hará y cuál será su suerte durante brido de predicciones, los caldeos, son una mis—
toda su vida, etc. IIld C0Sd.
Para oprobio del espíritu humano, este error reinó Los filósofos que combatieron ese error, no ala
casi en todos los pueblos y en todos los siglos; los cal— caron su fundamento, esto es, la pretendida divinidad
deos, que se distinguieron por su habilidad en la as— de los astros, y por consiguiente no pudieron des—
tronomia, deshonraron esta ciencia mezclándola con truirle; sus raciocinios eran muy abstractos para que
la astrologia. Este abuso se proscribió por las leyes estuviesen al alcance del pueblo. La luz del cristia
de Moisés, por las de los emperadores paganos, y nismo fue mas eficaz; mas no reprimió enteramente la
aun mas rigurosamente por las de los emperadores costumbre de dar fe á las predicciones de los astrólo—
cristianos, y de la Iglesia. Muchos filósofos se dedica gos. Cuando los árabes se dedicaron á estudiar la as—
ron á este estudio vano y frívolo, y confiaron en sus tronomía, adolecieron de la misma flaqueza que los
observaciones, en particular, el emperador Juliano; caldeos, y contribuyeron de este modo á sostener la
Ciceron la impugnó en su libro De fato. Los Padres preocupacion, Esta falsa ciencia reina tanto como en
de la Iglesia y los teólogos nada omitieron para des tiempos pasados entre los griegos, y se pretende que
engañar á los hombres acerca de esto, haciéndoles es bastante comun en Italia.
ver los absurdos é impiedades que contenia. Mas aun, Sin embargo, los libros santos, las lecciones de
no hace largo tiempo que podemos felicitarnos de ha los Padres de la Iglesia y los anatemas lanzados con
ber curado de esta enfermedad. Bajo la regencia de tra esta supersticion hubieran debido desarraigarla.
Maria de Médecis ninguna señora hubiera emprendi Estaba severamente prohibido á los judios el consul
do un viaje sin haber consultado antes á su astrólogo, tar ninguna clase de adivinos. Levit., c. 19, y, 31.
á quien llamaba su varon. Luis XIII fue apellidado Deut., c. 18. y 10. El profeta Isaias reprende la
el Justo porque habia nacido bajo el signo de la ba— credulidad de los babilonios y la loca confianza que
lanza; y los historiadores nos refieren que cuando tenian en sus astrólogos, c. 7, y. 13. «Que aparez
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can, dice, estos hombres tan hábiles á contemplar el de la guerra ó de la matanza, como algunos incrédu
cielo y á observar los astros; que calculen las lu los afectaron interpretar, Convenimos, sin embargo,
naciones para predecirnos el porvenir; que os salven en que el verdadero Dios se llamó algunas veces
al presente de vuestras desgracias; pero no, son co el Dios de los ejércitos de Israel, para dar á enten
mó la paja consumida por el fuego, y no pueden li der que él solo era de quien los israelitas esperaban
brarse á sí mismos». la victoria; mas no es este el sentido mas comun
Una ley del emperador Constancio prohibe, bajo del título de Dios de los ejércitos. Men. de l“Acad.
pena de la vida, consultar á los astrólogos ó malemá. des Inscrip., t. 18, in 12, p. 30; tomo 71, pági
ticos y demas adivinos. Aun cuando lleva tambien el na 151.
nombre de Juliano, no fue formada sin embargo con No es de admirar que los sirios y los árabes se ha—
su consentimiento, pues que en su obra contra el yan adherido singularmente al culto de los asiros.
cristianismo se declara pertidario de la astrologia. En estos horrorosos desiertos, donde el dia no pre
S. Cirilo, contra Juliano, lib. 10, p. 356 y 357. Ho senta otra cosa mas que un cuadro uniforme y triste
norio y Teodosio desterraron tambien á los astrólo— de vastas llanuras cubiertas de arena seca, la noche
gos. Orígenes, S. Basilio, S. Ambrosio y S. Agustin desplega por el contrario á vista de todos un espectá
demostraron la vanidad é ilusion de sus predicciones. culo magnífico. Casi siempre clara y serena, presen
S. Epifanio nos refiere que Aquila fue excomulgado ta á la visla admirada el ejército de los cielos en todo
por no haber renunciará la astrologia. Mu su esplendor. Al ver un espectáculo tan maravilloso,
chos concilios han condenado la confianza que se te— el tránsito de la admiracion á la idolatría era muy fa
nia en este arte funesto, y prohibieron severamente cil para hombres ignorantes, es cosa muy sencilla que
recurrir á él. un pueblo cuyo clima no ofrece ninguna belleza que
Nuestros reyes han confirmado estas leyes con sus contemplar sino la del firmamento, la escogiese con
decretos en los últimos siglos. Thiers, Tratado de las preferencia como objeto de su culto, Tal es la relec—
supersticiones, l. 1.º, c. 7, l. 3, p. 23. sion muy sensata de un escritor moderno.
Se dice que la filosofia solo pudo desengañarnos so Del mismo modo, segun observa otro sabio, la as—
bre esta máteria; mas si la religion no ha contribui tronomía formó la gran religion, que llenó toda el Asia
do en manera alguna, ¿por qué los antiguos filósofos
bajo formas algun tanto diferentes; en todo el oriente
no pudieron nunca conseguirlo, y por qué muchos de se erigieron una multitud de ídolos astronómicos,
ellos cayeron en la misma preocupacion que el vul cada uno de los cuales representaba ya el sol, ya la
o? Los Padres la impugnaron con razones sacadas luna, sus fases, sus variaciones; ó bien los planetas,
e la filosofia, como igualmente con las de la religion.
las constelaciones y los diversos prntos del cielo; ó
Si se quiere comparar los argumentos de Barclayo, ya unas figuras alegóricas del dia y de la noche, de
en su Arguis, con los de los Padres, se verá que son
*
la mañana y de la tarde, de los puntos solsticiales y
los mismos. Véase A DivuNo. equinocciales, las de los años, meses, semanas y dias,
y de todo cuanto estaba figurado por la Escritura
Astros. La primera idolatria comenzó por el cul pudo hacerse un personage; y finalmente de todo lo
to de los astros. Tan luego como los pueblos perdie que habiendo servido en unos siglos mas sencillos
ron de vista la revelacion primitiva, se figuraron para indicar los trabajos de la agricultura, pudo con
que los astros eran unos seres animados é inteligen vertirse en objeto de veneracion. s.
tes. Mas, ¿cómo es posible concebir que estos grandes En medio de esta demencia general, es digno de
cuerpos siguiesen una marcha tan regular, si no eran nuestra atencion el considerar al pueblo judio solo
la morada de un genio que los condujese ? Su luz, adorador del verdadero Dios, á cuyo pueblo le estaba
su calor, las influencias que de ellos emanan son muy prohibida toda clase de imágenes; y el hallar en esta
necesarias á los hombres; son pues unos seres bien prohibicion del legislador una prueba de esta verdad,
hechores á quienes debemos reconocimiento. Fre esto es, de que el abuso de las figuras ó imágenes ha
cuentemente nos anuncian los cambios del aire, el causado la mayor parte de los errores de los pueblos
buen tiempo y la lluvia; sin duda estan dotados de politeistas.
una inteligencia superior y de un espíritu profético. Como la observacion de los astros servia para fijar
Asi discurrieron no solo los ignorantes sino tambien las fiestas rurales y los trabajos de la agricultura, se
los filósofos; Celso, en Orígenes, se esfuerza en pro la halló ligada con la religion; de lo que resultó que
bar que debemos tributar un culto á los astros. Mu los observadores fueroná la vez astrónomos y sacerdo
chos Padres de la lglesia se persuadieron tambien de tes. Esta es una de las razones de la esactitud y per
que los astros eran conducidos, no por los dioses, co severancia con que se observaban los astros; mas
mo creyeron los paganos, sino por unos ángeles su tambien fue una causa de las supersticiones que se es
bordinados á Dios. tablecieron, desde el momento en que las relaciones
Los hebreos y demas orientales llamaban á los as del cielo con la tierra fueron consideradas como in
tros el ejército del cielo, militia cali. Los profetas fluencias, y por cuya razon la astronomía degradada
reprendieron frecuentemente á los judios porque ado no fue otra cosa que la astrología.
raban á Baal, al sol; Astaroth ó Astarté, á la luna La historia de la creacion, tal como Moisés la de
y al ejército del cielo; esta idolatria fue la que se lla lineó, era el mejor preservativo contra el error de los
mó Sabismo ó Zabismo. Por cuya razon los escritores paganos; nosenseña que Dios crió los astros para pro
sagrados acostumbraron llamar al verdadero Dios el vecho de los hombres, y los rige con su voluntad; no
Dios de los ejércitos, es decir, el criador del cielo y siendo por consiguiente ni dioses ni genios tutelares
de los astros. Este nombre no significa pues el Dios mas favorables á una nacion que á otra. Moisés dijo
 ASU 181 A l.A
á los «Ni suceda tampoco que alzando los ojos de Maria Santísima en su propio cuerpo. Se ha habla
al cielo, mirando el sol y la luna y todos los astros do de esta fiesta en las capitulares de Carlomagno y
del cielo, cayendo en error, adores, ó Israel, y reve en los decretos del concilio de Maguncia, celebrado
rencies las criaturas que el Señor tu Dios crió para el en 813. El papa Leon IV, que falleció en 855, insti.
servicio de todas las gentes que viven debajo d cie tuyó la octava de la Asunción de la Virgen Maria, que
lo». Deut., c. 4, y. 19. Esta leccion serviá tambien no se celebraba aun en Roma. En Grecia, esta festivi
para fortalecer á los hombres contra el terror de los dad se estableció á poco tiempo, bajo el imperio de
eclipses, de los meleoros y de los singulares fenóme Justiniano, segun algunos, y segun otros bajo el de
nos, con cuya aparicion se consternaban siempre los Mauricio, contemporáneo de S. Gregorio el Grande.
adoradores de los astros. Andrés de Creta, hácia el fin del siglo VII, testifi
«No lemais, dice Jeremias, las señales del cielo, ca, sin embargo, que esta festividad no se habia es -
que temen los gentiles», c. 10, y. 2. Por esto final tablecido mas que en algunas iglesias; mas en el XII
mente, los judios se habian preservado de la locura lo fue en todo el imperio por una ley del emperador
de los pronósticos, de la adivinacion por medio de los Manuel Commeno. La Asuncion se celebrabá igual
astros , de los horóscopos y de la astro'ogia judicia mente entonces en el Occidente, como aparece por las
ria, etc. Los que no creen en la revelacion, deberian cartas 17 de S. Bernardo á los canónigos de Leon,
enseñarnos en qué consiste que Moises fue mas ilus y por la creencia comun de las iglesias que conside
trado que los sabios de todas las naciones de que esta— raban la Asuncion corporal de Maria como un senti
ba rodeado. miento piadoso, aunque no decidido por la Iglesia
universal. Véanse las cidas de los Padres y de los Már
Asuncion, del latin, assumptio, término der tires, 15 de agosto. - -

vado de assumere, tomar, elevar. Esta voz significaba o S. " En el momento que Dios habia señalado
otras veces en general el dia de la muerte de un san ara poner á Maria en posesion de la recompensa que
to, porque su alma se elevaba al cielo. a estaba reservada, desprendió el amor el alma de la
Asuncion, se dice en el dia, particularmente en la augusta Virgen de los lazos de su cuerpo. Todos los
Iglesia romana, una festividad que se celebra todos los justos, dice S. Francisco de Sales, mueren en la ha
años el dia 15 de agosto, para honrar la muerte, re— ¿ del amor sagrado.....; pero lo mas elevado de
surreccion y entrada triunfante de la Virgen Santísi— este amor, es que algunos mueren de él... Tal fué la
ma en el cielo. Esta festividad llegó á ser aun mas so muerte de la Virgen Santísima, de quien es imposi
lemne en Francia desde el año 1638, en que el rey ble imaginar haya muerto de otra manera que de
Luis XIII eligió este dia para poner su persona y su amor; muerte la mas noble de todas, y debida por
reino bajo la proteccion de la Virgen Santísima; cuyo consiguiente, á la mas noble vida que jamás hubo en
voto fue renovado en 1738 por el rey Luis XV. lre las criaturas; muerte de la que, dice S. Francisco
Esta fiesta se celebra tambien con mucha solemni de Sales, desearian morir los mismos ángelessi fueran
dad en las iglesias de oriente. Sin embargo la Asun— capaces de ella. El cuerpo de Maria no estuvo mucho
cion corporal de la Virgen no es un artículo de fe, tiempo separado de su alma; este venerable cuerpo no
puesto que la Iglesiano lo ha decidido, y porque ade— quedó en el sepulcro llamólo Dios muy pronto á la
mas muchos antiguos y modernos pusieron en duda vida y lo revisió de la inmortalidad. Resucilada por
la referida Asuncion corporal. Usuardo, que vivió en su Hijo, fue elevada al cielo por este mismo Hijo ado
el siglo nono, dice en su martirologio que no encon rable, y entró triunfante en la celestial Jerusalen por
trándose el cuerpo de la Virgen Santísimna sobre la el poder de Jesucristo, como el mismo Jesucristo ha
lierra, la Iglesia que es sábia en sus juicios, quiso bia entrado por el suyo propio». (Véase al abate Gui
mejor ignorar con piedad lo que la divina providen llois, Esplication litterale et morale des Epitres et
cia hizo de él, que aventurar nada apócrio ó mal fun Evangiles. etc).
dadosobre este objeto; palabras que se hallan tambien
en el martirologio de Adón. Hay muchas personas Atanasio San), obispo y patriarca de Alejan
que no llaman á esta festividad Asuncion de la Virgen dria fue uno de los mas célebres Padres de la Iglesia
Santísima, sino solamente su sueño, dormitio, esto en el siglo IV. Sus combates contra los arrianos, las
es, la fiesta de su muerte; nombre que la dieron tam-, persecuciones que sufrió por su causa, la constancia
bien los griegos, que la designaron ya por METADSAsys con que sobrellevó sus calumnias, sus muchos des
muerte ó tránsito, y ya por koyMESys sueño ó reposo. tierros, y una vida errante y siempre espuesta por
Sin embargo la creencia comun dela Iglesia es que defender la fé, son unos hechos conocidos de todos los
la Virgen Santísima resucitó y que está en el cielo en que han leido la historia eclesiástica. Algunos incré
cuerpo y alma. La mayor parte de los Padres griegos dulos tomaron ocasion de esto para pintarle como un
y laiinos, que escribieron despues del siglo IV, son vigilante imprudente, como un bolafuego y como un
de esta opinion, y el cardenal Baronio dice que no se fanático. Sin embargo, lo cierto es que jamás empleó
podria sin lemeridad asegurar lo contrario. Este es otras armas que la paciencia, la prudencia y la fuerza
iambien el sentir de la facultad de teologia de Paris, de la verdad en una persecucion de cincuenta años,
la cual al condenar el libro de Maria de Agreda en Su caracter se manifiesta en sus escritos; no injuria á
1697, declaró que creia que la Virgen Santísima sus adversarios, ni trata de irritarlos, sino que los
habia sido elevada al cielo en cuerpo y alma. Entre confunde con la autoridad de la Sagrada Escritura y
los ornamentos de las iglesias de Roma, bajo el papa con la fuerza de su raciocinios. Otros le vituperaron
Pascual, que murió en 82, se hace mencion de dos por lo poco que escribió acerca de la teologia moral;
de ellos en los cuales estaha representada la Asuncion pero estaba muy ocupado en salvar el dogma de los
TOMO I. 2)
 ATA 182 ATE
peligros de que estaba amenazado para que emplase el domina al lector, y este se encuentra persuadido, sín
iiempo en componer tratados de moral; muchos au apercibirse de que se haya intentado persuadirle:
tores protestantes hicieron justicia á sus talentos y vir doctor y orador de una sabiduria estrema, de un gus
ludes. La mejor edicion de sus obras es la que dió to esquisito, y de una exactitud única en la espresion,
dom de Montfaucon, en tres volúmenes en folio. Se acomoda siempre el giro del discurso al carácter de
conviene en que el símbolo que lleva su nombre no es la materia que trata, y al de las personas que le es—
suyo, sino que está sacado de sus escritos. Vida de los cuchan. Erasmo era gran admirador del estilo de
Padres y de los Mártires, 2 de mayo. S. Atanasio ; y en cuanto á su fondo, ademas de lo
o. S" Dice un historiador: «Dios que le destina espuesto y de la justa reputacion de que gozan sus es
ba á S. Atanasio) á combatir la mas terrible de las critos, son dignas de tenerse presentes las palabras de
heregias, armada á la vez con las sutilezas de la dia un antiguo religioso llamado Cóme: «Cuando halleis
léctica y con el poder de los emperadores, le habia fa y alguna cosa de las obras de S. Atanasio, si no teneis
vorecido con todos los dones de la naturaleza y de la » papel, escribidlo sobre vuestros hábitos». El célebre
gracia, que podían habilitarle para llenar lán alto aleman Maehler, autor de la Simbólica (1) ha escrito
deslino». En efecto, su celo, elocuencia, su energia y una historia de S. Atanasio y de la Iglesia de su siglo,
valor apostólico le colocan en el glorioso catálogo de que sin duda será digna de su docta pluma.
los primeros defensores de la fé; y despues de cuarenta
y seis años por lo menos de episcopado, murió entre Atenágoras. Filósofo ateniense convertido al
los brazos de su pueblo el 2 de mayo de 373. Hé cristianismo, presentó el año 177 a los emperadores
aqui como se esplica S. Gregorio Nacianceno: «Ter Marco-Aurelio-Anlonino, y Lucio—Aurelio-Comodo,
minó su vida en una edad muy avanzada para ir á una apologia en favor de los cristianos, por la cual jus
reunirse á sus padres, á los patriarcas, á los profetas, tifica su creencia y sus costumbres conira las calum
á los apóstoles y á los mártires, cuyo ejemplo imitó nias de los paganos. Tambien compuso un tratado
combatiendo por defender la verdad. Para formar su acerca de la resurreccion de los muertos.
epitafio en pocas palabras, diré: que salió de esta vi Pregun la desde luego porqué bajo el reinado de dos
da mortal con mucho mas honor y gloria que tuvo en
príncipes filósofos y naturalmente justos no se conce
Alejandria, cuando despues de sus diferentes des de á los cristianos que hacen ¿
de honrar á
tierros entró en aquella ciudad de la manera mas la Divinidad, la misma libertad de que gozaban las
triunfante. En efecto, quién no sabe que todos los supersticiones mas absurdas; porque no se procede
hombres de bien lloraron amargamente su muerte, y contra hombres cuyas costumbres son inocentes, en la
que la memoria de su nombre ha quedado profunda misma forma jurídica que contra unos malhechores
mente grabada en el corazon de aquellos? Ojalá que culpables de los mas grandes crímenes.
desde el cielo se digne echar sobre mí sus miradas, Los paganos acusaban á los cristianos de tres crí—
favorecerme y asistirme en el gobierno de mi rebaño, menes principales: de ateismo, de matar y comer un
y conservar en mi Iglesia el depósito de la fél Y si por niño en sus reuniones, y de entregarse despues á la
los pecados del mundo debemos esperimentar los es impudicicia.
tragos de la heregia, ojalá nos libre de estos males, Atenágoras pregunta cómo es posible imputar el
y por su intercesion consigamos la gracia de gozar ateismo á los cristianos, que adoran un solo Dios en
con él de la vision de Dios!» tres personas. Hace ver que muchos filósofos enseña
Hay varias ediciones de las obras de S. Atanasio: ron la unidad de Dios; que el politeismo es un absur
las de Commelin, de 1600, y la de Paris de 1627 con do, que los cristianos reconocen tambien unos ánge—
las correcciones de Pedro Nannio, son hermosas; pe les de quienes Dios se sirve para egecutar sus órde—
ro la mejor es la de dom Montfaucon en tres tomos en nes; que la pureza de su vida demuestra suficiente—
folio 1698, corregida segun los antiguos manuscri mente que son ateos.
tos, enriquecida con una nueva version, una vida del El principal fundamento de esta acusacion era la
santo, muchas obras que no se habian publicado, y aversion manifestaban los cristianos á los sacri
algunos opúsculos atribuidos á S. Atanasio...;. Las ficios y a la idolatria de los paganos; Atenágoras se
obras principales de este Padre son: Defensa de la Tri dedica á probar que no se debe honrar á Dios por
nidad y de la Encarnacion; sus apologias; sus cartas; medio de sacrificios sangrientos; que en lasdiferentes
sus tratados contra los arrianos, los melecianos, apo ciudades del imperio no se adora á los mismos dio
linaristas y macedonianos. El estilo de S. Alanasio, ses; que es un absurdo el tomar á las criaturas, á la
dice un celebre crítico, es acomodado á la materia que materia, al mundo. á sus diferentes partes, ó á los
trata, á la vez noble, sencillo, elegante y patético. ídolos por dioses; hace ver que todas estas supersti—
Focio, el mejor crítico de los escritores de su lengua, ciones son de invencion muy moderna.
dice que en los escritos de este Padre se halla una dic En vano pretendian los paganos que el culto de los
cion pura, fácil, abundante, una fuerza y delicadeza ídolos se referia á los dioses que representaban y que
inimitables. Todo lo que dice, y presenta bajo la ma estaba confirmado por medio de la virtud milagrosa
yor claridad, gira sobre una lógica sólida, y suscep de muchos de estos simulacros. Atenágoras demuestra
iible al mismo tiempo de términos nobles y de los ador con el testimonio de los filósofos y de los poetas, que
nos de la alta elocuencia. Pero su mayor arte consiste estos pretendidos dioses habian sido unos hombres que
en ocultar el arte mismo, y nada parece tan sencillo y no merecian ningun culto religioso: insiste sobre la in
natural como los rasgos mas victoriosos. Se insinua decencia de sus figuras, sobre las pasiones y sobre los
en los ánimos, bajo tales formas que hacen desapare 1) Está para publicarse en nuestra lengua esta obra de sin
cer su persona; no es el autor, es la misma razon quien gular mérito.
 ATE 183) ATE
crimenes que se les atribuian; manifiesta que se jus— segun los designios de Dios; en esto no hay ningun
tificaban mal estas fábulas queriendo darlas un senti platonismo.
do físico, y aplicándolas á los fenómenos de la natu— Por una parte, muchos de nuestros filósofos defen—
raleza. dieron que Platon, que admitia un Dios supremo y dio
Espone la doctrina de Tales y de Platon acerca de ses secundarios ó unos genios inferiores á Dios, no era
los demonios, y la de los cristianos respecto de los án politeista: por otra nuestros críticos sostienen que esta
eles buenos y malos; sostiene que los espíritus ma— doctrina presentada á dos emperadores instruidos, de
f¿ fueron los verdaderos autores de la idolatria, y bió parecerles un politeismo. Barbeyrac pretende que
de todas las ilusiones que habian servido para estable— Atenágoras no enseñó el culto de los ángeles; cómo
cerla entre los hombres. pues pudieron los emperadores inferir de su doctrina
En cuanto á los otros dos crímenes que se atribuian que los cristianos adoraban muchos dioses? Antes de
á los cristianos, Atenágoras sostiene que estaban sufi vituperará los Padres deberian comenzar suscensores
cientemente refutados por medio de la pureza de cos por ponerse de acuerdo consigo mismos.
tumbres que reina entre ellos, por la templanza y la 3.° Acusan á Atenágoras de no haber sido ortodoxo
fidelidad que guardan en el matrimonio, por la mo acerca del dogma de la Trinidad, y hasta el presente,
destia con que se saludan, por su amor hácia la virji dice Barbeyrac, no ha sido justificado. Este crítico no
nidad, por el desvio con que miran las segundas nup leyó probablemente ni la Defensa de la fe de Nicea por
cias. Representa cuán triste les es ser acusados de Bullus, nila sesta advertencia de Mr. Bossuet á los pro
crímenes contrarios por unos hombres, que son ellos testantes, c. 10, n. 69. y sig., donde Atenágoras está
mismos culpables de todas las especies de impudicicia justificado plenamente y sin réplica. Este autor dice:
y de maldades. «Nosotros reconocemos á Dios Padre, Dios Hijo, y
Lejos de poder ser convencidos de ningun homici— Dios Espíritu Santo; manifestamos no solo su poder en
dio, tienen horror á ver derramar la sangre humana, la unidad , sino tambien su distincion en el orden».
ya sea en los suplicios de los criminales, ó bien en los Legat., n. 10. Para hallar aqui ideas politeistas, Bar
combates de los gladiadores; consideran los abortos beyrac le hace decir: «Nosotros tenemos á Dios Padre,
voluntarios como un asesinato; y la costumbre de es Dios Hijo, y al Espíritu Santo unidos á la verdad de
poner los hijos como un verdadero parricidio. un cierto modo; mas sin embargo distintos y conser—
Atenágoras concluye esponiendo la creencia de los vando su respectivo orden entre sí. Tenemos tambien
cristianos acerca de la resurreccion general, de las re
unas divinidades inferiores á estas, etc». Es permitido
compensas y las penas de la otra vida; observa que alterarde este modo la doctrina de un autor, para te
aun cuando estas cosas fuesen unos errores, no serian ner derecho de imputarle errores?
crímenes por los cuales fuese justo aborrecer, perse— .." El gran crimen de Atenágoras á los ojos de
guir y dar muerte á los que tuviesen estas opiniones, nuestros críticos licenciosos, es haber hecho demasia
Esta apologia fue presenlada veinte y seis ó veinte do caso de la virginidad, y haber dicho que las segun
y siete años despues de la de S, Justino. das nupcias son un honesto adulterio. Desgraciada
Los críticos protestantes Jurieu, Le Clerc, Barbey mente casi todos los antiguos Padres han hablado del
rac y sus copistas dirigen muchas acusaciones contra mismo modo, y esta fue la opinion general de los pri
la doctrina de Atenágoras. 1.ºTuvo, dicen, demasiadas meros cristianos. Cuando se refieren los escesos á que
ideas plalónicas. Mas es preciso atenderá que este es condujo la licencia del divorcio entre los paganos, no
critor hablaba á unos emperadores que profesaban la sorprenden las espresiones ni la moral severa de nues
filosofía, y que sin duda respelaban á Platon; era un tros apolojistas. V. BigAMIA.
rasgo de prudencia el conformarse con su gusto, y ale 5."Se ha dicho á la ventura, que Atenágoras no
garles en muchos punios la autoridad de este filósofo. habia sido citado mas que por S. Epianio; pero esto
Aun cuando Atenágoras hubiera conservado despues es un error: fue citado por Focio, cod. 22 , despues
de su conversion las opiniones platónicas, que le pare de S. Metodio obispo y martir, muerto hácia el año 311
cian conciliables con los dogmas del cristianismo, no y por Felipe Sidelas, Serm. 2.
vemos que por esto fuese criminal. De aqui mismo se No nos admiramos de la afectacion de los incrédu
infiere que nuestra religion, desde su nacimiento, no los en deprimir á los antiguos defensores del cristia—
lemió el ecsamen de los filósofos. nismo; pero no es muy honroso para los prolestantes
2.º Se pretende que Atenágoras no atribuye á Dios el haberles dado materia para tantas falsas acusa
mas que una providencia general , que supuso que C10) tºS.
los ángeles estaban encargados en los pormenores del Las dos obras de Atenágoras se hallan á continua
gobierno del mundo. Segun Barbeyrac, esta idea to cion de las de S. Justino , en la edicion de los bene
mada de Platon, presentada á dos emperadores paga dictinos.
nos debió hacerles inferir que los cristianos eran po—
liteislas. Ateo, Ate ismano. Entendemos por atcismo no
No olvidemos que estos dos príncipes eran filósofos, solo el sistema de los que no admiten Diosalguno, sino
y capaces por consiguiente de hacer distincion entre tambien la opinion de los que niegan la providencia,
unos seres creados tales como los ángeles y un Dios porque hablando con propiedad, un Dios sin providen
increado; que segun la doctrina terminante de Atená cia no ecsiste para nosotros. Tal es la reflecsión queha
goras ningun ser creado es Dios. En su apología y en ce Ciceron contra los pretendidos dioses de Epicuro.
su Tratado de la resurreccion, atribuye espresamente Triste cosa es que sea esta al presente la opinion do
á Dios el gobierno y el destino del hombre; supone que minante entre los incrédulos; mas la multitud de es
los ángeles no obran sino en virtud de las órdenes y critos que han aparecido en nuestros dias para esta
 A 18 ATE
blecer esta doctrina desconsoladora, prueba mas que nos arrastraria en pos de sí con una impetuosidad
suficientemente el número de sus partidarios. tal, que privaria al hombre de su libertad, y toda la
A los filósofos incumbe el refutar los diversos sis economia del mundo actual se hallaria trastornada...
temas del ateísmo, y demostrar la existencia de Dios En esto, como en todo lo demas, el cristianismo se
por las pruebas que la razon sola nos sugiere. Véa manifiesta eminentemente razonable con la razon, y
se Dios. -
podemos observar cómo la revelacion confirma, pi
Hé aqui á qué se reducen los principales argu rificando y perfeccionando, todo cuanto inspira una
mentos del ateismo: no se comprende á Dios, no se sana razon. La revelacion nos enseña que el tiempo
le vé en parte alguna, se esplica todo sin él. en que vivimos es el de las sombras y oscuridades, y
I. Es cierto que si pudiéramos conocer á Dios no el de la plena y perfecta luz; que es preciso co
no sabríamos comprenderle, pues sus perfecciones menzar por creer para merecer el ver; que llegará el
son infinitamente mas elevadas sobre nuestros débi tiempo en que se descorrerá el velo que nos oculta la
les pensamientos: la incomprensibilidad de la natura divinidad, y que, semejante al crepúsculo que nos
leza divina le es propia de tal modo, que el rehusar anuncia el sol, el tiempo presente no es sinó la au—
de crcer en Dios porque es incomprensible, es lo mis rora del dia de la ¿
mo que rehusar de creer en Dios porque es Dios. llI. Bien lejos de esplicarlo todo sin Dios, como
Cómprenderá Dios seria tener de él una idea com lo pretende orgullosamente el aleisino, sin Dios no
pleta, lo que escede á la capacidad de un entendi se puede esplicar ni la ecsistencia de la materia, ni
miento debil y limitado como el del hombre: cono la del movimiento, ni en particular la del hombre.
cer á Dios es saber que existe y tener acerca de él Si la materia no es obra de Dios, es preciso decir
ideas incompletas, pero bastante desarrolladas para que ecsiste por sí misma, que es elerna de toda eter—
saber lo que es respecto á nosotros, y lo que nosotros nidad, que por su naturaleza debe ecsistir necesaria
somos con relacion á él. «Si es cierto, dice M. Frays mente; de modo que la materia es lo que los metafí
sinous, que este mundo no es mas que un encade sicos llaman el ser necesario. M. Frayssinous demues
namiento de causas segundas y de sus efectos, ¿no tra que esta asercion es contraria á la razon. «Obser
puedo tener la idea de la causa primera, de el Ser vo desde luego que la materia no es una mera ficcion
autor y ordenador supremo de todas las cosas, aun de nuestro entendimiento, sino una cosa real, un
cuando en su modo de ecsistir y de obrar se escape compuesto de partes unidas entre sí: de aqui, si la
de mis ideas? Por consiguiente se puede tener la idea materia ecsiste necesariamente, cada una de sus par—
de Dios tan incomprensible como es; ¿y no es lo mis— tículas tiene tambien una ecsistencia necesaria; tan
mo tener la idea de Dios que saber que es incom— to que seria imposible, sin contradecirse, suponerla
prensible?» como no ecsistente: asi que no habrá un solo grano
No hay duda de que no se comprende la eternidad de arena, una molécula de aire, ni un átomo de ma—
de Dios; mas “la elernidad de un ser cualquiera se teria, cuya ecsistencia no sea tan esencial como la
demuestra rigurosamente. Por la misma razon de redondez lo es al círculo. La idea del círculo y la de
que alguna cosa ecsiste al presente, es tambien ne la redondez son de tal modo inseparables, que es en—
cesario que haya ecsistido siempre; pues si antes de teramente imposible segregarlas sin contradecirse á
todo lo que tuvo principio no existia cosa alguna, sí mismo. Por consiguiente, pregunto, si sucede lo
no habia pues mas que la nada; y si no hubiera ha mismo con la idea de un átomo y la de su ecsisten
bido mas que la nada, tampoco habria ahora otra cia; suponiendo que este átomo no ecsiste, se lasti
cosa: la nada no puede producir cosa alguna: luego maria la esencia de las cosas: luego este átomo ecsis
ecsiste un ser increado, eterno, que ecsistia antes le necesariamente; y lo quedigo de lo uno lo diré de
de todos los tiempos, un ser que jamás tuvo princi todos: por consiguiente hay un Dios. Observo tam
pio y que nunca tendrá fin. La medida de su dura— bien que la suprema perfeccion consiste en ecsistir
cion pasada es la eternidad; la medida de su dura— por sí mismo, y tener de este modo todas las perfec—
cion futura es tambien la eternidad: lo que hizo de ciones por su propia esencia. El ser que ecsiste por
cir á Pascal que el hombre es un punto colocado entre sí mismo es independiente; todo lo posee; y quién
dos eternidades. Que este ser eterno sea Dios ó la ma pudiera limitare? De modo que si hay una cosa de
teria, no lo ecsaminamos aqui: ved pues á los ateos mostrada en metafísica, es que el ser necesario tiene
obligados á admitir siempre la eternidad de un ser todas las perfecciones, la inteligencia, la sabiduria,
cualquiera; y sin embargo, qué cosa hay mas incom la hondad, la libertad y la justicia: luego si el ser
prensible? necesario fuese la materia, á ella seria preciso con
I. El ateo quisiera que Dios se manifestase mas; cederle todas estas perfecciones; bajo este supuesto;
pero si su ecsistencia fuese para nosotros un hecho qué violencia tan estraña no necesitariamos hacer á
tan sensible como la del soló la de nuestro propio la razon? No es esto todo. Como cada una de las
cuerpo, en dónde estaria el mérito de creer en él? partículas de materia ecsistiria necesariamente, cada
«Comprendo muy bien, añade M. Frayssinous, como una de ellas seria soberanamente perfecta, seria Dios;
Dios es á la vez visible y oculto: visible en sus obras, y hé aqui como, desechando al verdadero Dios, el
las cuales son como otros tantos espejos donde refle— ateo poblaria de dioses el universo entero. Observo
jan sus perfecciones adorables, y oculto á causa de ademas que la materia no ecsiste sino con los atribu
las sombras que cubren su infinita majestad; es co tos que le son naturales, con una cierta disposicion
me el sol oculto detras de una nube. Si la divinidad de partes, un cierto modo de ecsistir y una figu
se hallase mas distante de nosotros, podria ser inase— ra cualquiera: luego la materia no pudo ecsistir ab
quible á nuestra vista; y si estuviera mas prócsima acterno sin tener una forma determinada, eterna co
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mo ella, y por lo mismo indestructible é inmuta Mucho tiempo antes de David habia observado
ble; y sin embargo, esta inmutabilidad está desmen - lob que el ateísmo es el vicio peculiar de los grandes
tida todos los dias por la variacion perpetua de sus del mundo, de los hombres ciegos con la prosperidad,
formas.» corrompidos por la opulencia y pervertidos por el usó
No es mas esplicable el movimiento que la mate— inmoderado de los placeres. Dijeron á Dios « Apár—
ria sin recurrir á Dios. Una de dos: el ateo dirá que late de nosotros, que no queremos saber nada de tus
el movimiento se comunicó á la materia en el princi mandamientos. ¿Quién es ese omnipotente para que
pio; y entonces se le preguntará de quién lo recibió nos empleemos en su servicio? ¿Ni qué provecho he—
sino de una causa distinta de sí misma; y este pri— mos de sacar de imporar su auxilió?... Mas Dios les
mer motor, distinto de la materia, es Dios. O bien dará su merecido, y enlonces le conocerán.» Job,
pretenderá decir el ateo que el movimiento es esen— c. 21, y 1, 15 y 16.
cial á la materia; pero se le responderá: yo tengo la Vendrá tiempo, dice S. Pablo, en que no pudien—
idea de un cuerpo y la del movimiento, y conozco do los hombressufrir el yugo de la sana doctrina, bus
que puedo separar estas dos cosas. Puedo suponer á caran y congregarán multitud de maestros, que lison
un cuerpo en reposo, sin destruirlo, y la misma es— geándoles los oidos, deseosos de oir cosas nuevas, con—
periencia me prueba que un cuerpo permanece inmó emporicen con sus malas inclinaciones y corrompi—
vil si no es movido por otro. Luego la idea de un das costumbres, con lo que huyendo de oir la verdad,
cuerpo no incluye la del movimiento; luego los cuer oirán ábulas y ficciones.» 2.ºad Tim., c. 4, y . 3 y .
pos tienen toda su esencia, sin que se les atribuya La fuente del ateísmo, segun la Sagrada Escritura,
ningun movimiento; luego el movimiento no les es es la corrupcion del corazon; muchos filósofos mo
esencial, y por consiguiente se les ha comunicado dernos han convenido en esto mismo, y la esperien
por una causa preexistente; y hé aquí que venimos cia lo prueba. Los griegos habian llegado al colmo de
á parar otra vez á la causa primera, á Dios. la prosperidad por sus victorias sobre los persas, cuan
Finalmente, sin Dios, la existencia del hombre es do sus filósofos se precipitaron en el epicureismo. Ro
inesplicable. No se podrá asegurar que hubo, ab ma habia llegado á ser la señora del mundo rebosan
alterno, individuos de nuestra especie, existentes por do con las riquezas del Asia, cuando el lujo introdujo
sí mismos necesariamente, y que fueron el origen dentro de sus muros esta filosofía mortífera. Los ju—
de todos los demas, porque estos individuos necesa dios acababan de ser libertados de la persecucion de los
rios existirian todavia: pues lo que existe por la ne reyes de Syria. y se habían enriquecido con el comer
cesidad de su naturaleza no puede cesar de existir. Se cio de Alejandria, cuando vieron nacer entre ellos el
ria por consiguiente preciso, remontándonos á la ca saduceismo, que no era otra cosa mas que un epicu
dena de las generaciones, llegar á un primer anillo,
reismo grosero. Sucederá, por ventura, que á nuestra
del cual es Dios el orígen y la causa. No nos detenvez el nacimiento del ateísmo venga á anunciarnos
gamos en los sistemas del hombre-planta, de las me—que locamos al mas alto punto de prosperidad á que
nuestra monarquía haya llegado desde su fundación?
tamorfosis, etc., por los cuales algunos insensatos es
plican el orígen de la especie humana. «En esta ma— Mas el lujo, padre de la corrupcion y del ateismo,
teria, los ateos, dice Mr. Frayssinous, se muestranprepara la ruina de los estados y la decadencia de las
mas crédulos que los niños que creen en las trans— naciones: lo que aconteció á las de que acabamos de
formaciones ejeculadas por la varita mágica de las hablar deberia hacernos temblar y obligarnos á ser
agoreras; y fábulas por fábulas, mas bien preferiria mas sábios. -

las historias graciosas con que se divierte nuestra in
ancia, que estos romances físicos que envilecen al
hombre, y producen en el corazon corrompido im—
presiones de tristeza y de muerte.» Concluyamos pues
con Leibnitz que Dios es la primera razon de las cosas.
El deber de un teólogo es el de hacer ver que los
autores sagrados conocieron perfectamente el carác
ter, las causas y los efectos del ateismo, que el re
trato que delinearon de los ateos de su tiempo con
viene tambien perfectamente á los del nuestro.
Segun el rey profeta, Ps. 12, «dijo el insensato en
su corazon: no hay Dios.» Este lenguaje es el que usan
los hombres corrompidos y perversos. Ninguno hay
entre ellos que obre el bien. Su boca respira el hedor
de las tumbas; su lengua exhala el veneno de las
serpientes, y tratan de pervertir por medio del error;
la fealdad de sus calumnias, la amargura de sus re
convenciones, demuestran que se hallan prontos á
derramar la sangre de sus adversarios. Pasan una vi
da triste y desgraciada, sin haber gustado de las de
licias de la paz, y tiemblan donde no hay motivo algu
no de pavor. El Señor es justo, se venga de estos in
sensatos, mientras que el pobre sumiso y tranquilo,
tiene depositada en Dios su esperanza,
1.º, Qué causa podria obligará un ateo á ser vir
tuoso? Sabe, á la verdad, que el vicio puede perju
dicarle; mas tambien hay circustancias en que el
vicio autorizado por el ejemplo puede llegará ser
ventajoso. Ya nos han advertido nuestros moralistas
ateos que en las sociedades corrompidas es preciso cor
romperse para llegará ser feliz, ponerse al corriente
de las costumbres dominantes de la época para ser es—
timado y aplaudido. Hay hombres tan mal constitui
dos por la naturaleza, á quienes es necesario el vicio
para su felicidad. ¿Qué importa que el vicio pueda da
ñar, si tambien puede ser útil? El acontecimiente de
pende del acaso; todo hombre dominado por una pa—
sion se siente continuamente inducido á ponerla en
ejecucion.
No hay remordimientos que temer desde el mo
mento en que se reconoce con suficiente valor para
ahogarlos.
Las faltas mas secretas pueden descubrirse; mas
tambien se han cometido muy grandes crímenes, sin
que nunca se haya podido averiguar quiénes fueron
sus autores. En las sociedades corrompidas son lan
comunes los delitos, que apenas se fija la atencion en
ellos; una dosis suficiente de desvergüenza ocupa el
 ATE (186 ATE
lugar de la probidad. A fuerza de raciocinios y de saria iria seguida de una desgracia eterna. Que los
paliativos llegan á justificarse en el dia las mas tirá hombres conozcan ó no el crítuen, es igual; Dios le
nicas iniquidades, y hacer equivocas todas las re conoce, y el culpable no se librará de su venganza:
putaciones. los remordimientos son los primeros suplicios, por los
La sociedad es útil sin duda para la felicidad de un cuales hace Dios sentir su justicia.
ateo; mas como otros muchos puede gozar de las ven Quela sociedad, que la patria, seanjustas ó injustas,
lajas que le proporciona la sociedad sin poner mucho agradecidas ó ingratas respecto de mí, Dios me or
de su parte: aquellos que sirven con la mayor efica dena adherirme á ellas y servirlas, como á ellas el pro
cia á sus semejantes no suelen ser los mas honrados; tejerme. Si faltan á su deber, esto no me dá derecho
las virtudes mas necesarias son comunmente las mas para violar el mio: Dios es testigo de mi conducta, y
oscuras, y los deberes mas penosos son los menos reá él solo pertenece recompensarme.
compensados. Por la ley general de la caridad, Dios manda áto
Se dice que debemos dedicarnos á servir á la pa— dos los hombres que se amen, que se ayuden y se sir
tria que nos protege. Mas cuántos hombres se apro van mútuamente: amigos ó enemigos, conciudada
vechán de los beneficios y de la proteccion de la pa nos ó estrangeros, bienhechores ó rivales, caractéres
tria, prestándola malos servicios, insultándola y de amables ó molestos, nadie está esceptuado de estaley.
clamando contra sus leyes, desacreditando á su go Aun cuando nos rehusasen su amistad, estariamos
bierno, y ensalzando hasta las nubes el mérito superior obligados á hacernos amables, á fin de no ofenderlos.
de sus enemigos. Segun un axioma autorizado entre Tal esel lenguaje de la religion, el de nuestros libros
los ateos, una patria que no nos hace felices, pierde santos, y el de los justos de todos los siglos, como tam
sus derechos nOSOlrOS.
bien el de la razon y el de la sana filosofía. Cuando los
Se añade, que un hombre debe hacerse amar. Dón ateos se obstinan en desconocerle, no les hacemos in—
de está esta necesidad para un ateo? Bástele el ser te justicia echándoles en cara que minan la moral por los
mido y que nadie se atreva á dañarle. Qué necesidad cimientos. Sin la creencia de un Dios soberano legis
tengo, dirá, de la amistad de un padre anciano, lador, remunerador y vengador, no hay leyes, no hay
enfermo, lánguido, á quien es preciso asistir y ali deberes ú obligaciones morales propiamente dichas,
mentar á mi costa? Qué me devolverá en cambio de ni vicios ni virtudes.
mi amistad? 2." La Escritura nos asegura que los ateos jamás
Convengo en que la ingratitud obligará á mi bien han gustado de las delicias de la paz, que no hay para
hechor á separarse de mí, quizás le hará arrepentir— ellos consuelo ni felicidad en este mundo: ellos mis—
se de lo que ha hecho por mí; qué me importa, si no mos se han tomado el trabajo de convencernos de esta
se halla ya en estado de hacerme bien alguno, ni de verdad. ¿Qué vemos en sus libros?
vengarse, ni de hacerme sufrir sus reconvenciones? 1." Una afectacion singular de degradaral hombre
Tambien confieso que la justicia es necesaria para y ponerle al nivel de los brutos, á fin de probar que
el mantenimiento de toda asociacion; mas se puede no es obra de un Dios sabio y bueno. No es este un
aprovechar de la sociedad sin contribuirá sostenerla. medio muy apropósito para inspirarnos valor, senti
Se ha probado doctamente en nuestros dias que mu mientos nobles, el heroismo de la virtud, y la salis
chos vicios son por lo menos tan necesarios para la faccion secrela de que goza una alma elevada al co
conservacion de la sociedad como las virtudes. nocer lo que es. Este envilecimiento voluntario cua
Ademas, no basta la justicia si no va unida con la dra muy mal con el orgullo filosófico.
caridad, la humanidad y la compasion hácia los des 2." Quejas amargas acerca de las miserias de la
graciados; mas sobre qué se funda, respecto de mí, humanidad, de los rigores de una naturaleza á quien
el deber de socorrerá un estraño, á un desconocido llaman madrastra, de laspasionesque nos atormentan,
que padece, pero á quien no me conoce y á quien no de los crímenes que nos deshonran, y de las plagas
volveré á ver jamás? que inundan la tierra. Infieren de aqui que una Pro
Es falso que ningun hombre puede estar satisfecho videncia bienhechora no se mezcla en el gobierno de
de sí mismo, cuando sabe que es el objeto del ódio pu este mundo. Estas sombrias reflexiones no son muy
blico. Muchos grandes hombres incurrieron en esta propias para hacernos estar contentos con nuestra
desgracia por sus virtudes y porel celo mas puro; otros suerte. Cuando los ateos pintan el género humano, le
se granjearon el favor público por medio de unos crí representan como una sociedad de malhechores cie
menes dichosos: tenian estos últimos mayor derecho gos, corrompidos, furiosos por religion. Por cierto que
para estar satisfechos de sí mismos que los primeros? puede uno felicitarse por vivir en semejante compañia
Todas las máximas de moral de los ateos son por ó esperar hallar en ella la felicidad.
consiguiente falsas cuando se las examina en rigor; 3.° Blasfemias contra la justicia de un Dios ven
pero aun cuando fuesen verdaderas, la generalidad
de los hombres es incapaz de hacer las reflexiones, gador, contra la severidad con que se pretende que
castiga el crímen. Esta idea, dicen, inspira el espanto,
los cálculos y los raciocinios necesarios para conocer y hace mirará Dios como un ser odioso. Por medio de
su verdad. Admitamos un Dios y una providencia, y este signo es dificil el reconocer la calma de una con—
estas máximas llegarán á ser leyes. ciencia pura, esenta de turbacion y de remordimien
Que el vicio nos sea útil ó pernicioso en este mun tos. Se quejan de que la virtud no es dichosa sobre la
do, no importa; Dios lo prohibe y lo castigará tarde tierra, y no quieren felicidad alguna en la otra vida.
º temprano. Aun cuando el vicio nos elevase acá en Mas si la virtud no tiene nada que esperar ni en este
la tierra al colino de la felicidad, solo seria por algu ni en el otro, ¿cuál será la causa de abra
10s momentos: la embriaguez pasagera que nos cau zarla?
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4.º, Ciertas dudas esparcidas acerca de la perpe— lerancia absoluta, es autorizará todos los malhecho
tuidad del órden físico del mundo. No sabemos, dicen, res á que infrinjan todas las leyes que los sujetan.
si una revolucion repentina no sumergirá de nuevo el Acusar á los vivos y á los muertos, denigrar los mo
universo en el caos. Jamás inspiró la supersticion mas tivos de todas las virtudes que han brillado en el mun
ciega un temor tan pueril y tan aburdo. Epicuro opi do, escudriñar todos los escondrijos de la historia para
naba que era aun mejor hallarse bajo el imperio de un hallar acusaciones contra los personages, hácia los
Dios, el mas caprichoso, que bajo el yugo de una ne cuales tuvo el género humano el mayor respeto, con
cesidad cruel á quien nada puede aplacar. En el dia mover al público contra los que predican la religion ó
sus discípulos, menos sensatos que él, prefieren el im los que la defienden, pintarlos como otros tantos be
perio de la necesidad al de la divinidad. llacos ó fanáticos enemigos de la sociedad, y atacará
5." Pródigos elogios al furor del suicidio. Si este los soberanos y á los gobiernoscomo cómplices del mis
es el término á que debe llegar la suprema felicidad de mo crímen; he aquí lo que han hecho los ateos en todo
los ateos, no se verá un hombre razonable tentado de tiempo y lo que hacen todavia. Si todos estos esce
envidiarsela. Es muy absurdo el prometernos la feli— sos no son dignos de castigo, ¿cuál ha sido, pues, el
cidad aca abajo si queremos abjurar la idea de un Dios objeto de la policía y de la legislacion?
vengador, y el querer probar despues que si estamos Es una impostura por su parte el pretender que en
disgustados de la vida, no hay cosa mejor que des— nada influye el ateísmo sobre las costumbres, y que
truirse. un ateo puede ser tan virtuoso como un hombre que cree
6.” Un sin fin de sofismas para demostrar que no en Dios; lo contrario se demuestra por su propia con
hay certeza alguna en nuestros conocimientos; que un ducta. Un ateo no evita el crímen sino cuando se ve á
escepticismo general es la sola filosofía del sabio. Mas ello obligado por las leyes; no puedeserhombre de bien
si todas nuestras opiniones son ciertas, el ateismo sin contradecir continuamente todos sus principios.
no es, por consiguiente, un sistema invenciblemente La influencia terrible que el ateísmo puede ejercer
probado y al que uno se pueda entregar con una com sobre las costumbres del pueblo, está demasiado pro
pleta seguridad. Dudar si hay un Dios, una religion bada por un hecho acaecido en estos dias. Hace cerca
verdadera y otra vida, no es estar convencido de que de diez años que se formó en la Lorena alemana y en
no hay nada de esto; la incertidumbre acerca de un el electorado de Tréveris una asociacion de gentes
objeto tan importante no puede ser una situacion dul del campo que habian sacudido todo principio de re
ce y agradable. Las quejas del presente, la incerti— ligion y de moral. Se persuadieron de que, poniéndose
dumbre sobre el porvenir, los furores contra Dios, y á cubierto de las leyes, podian satisfacer sin escrupulo
las invectivas contra los hombres, nunca fueron los todas sus pasiones. Para librarse de las persecuciones
síntomas de la paz y la felicidad. Nos vemos, por con - de la justicia, se conducian en sus poblaciones con la
siguiente, obligados á conformarnos con la sentencia mayor circunspeccion; no se veia en ellos ningun de
que el mismo Dios pronunció por medio del profeta sorden: mas se reunian por las noches en grandes
lsaías: «no hay paz para los impios». c. 8, y. 22. cuadrillas, marchaban á despojar á viva fuerza los ca
c. 57, y . 21. seríos distantes de los pueblos, comelian abominables
IV. El Salmista nos advierte que los ateos son unos escesos, y empleaban las amenazas mas terribles para
hombres de mal carácter, peligrosos, malhechores, y obligar al silencio á las víctimas de su brutalidad. Ha
perjudiciales á la sociedad; ¿es esta, por ventura, una biendo sido cogido casualmente uno de sus cómplices
acusacion falsa? por algun otro delito , se descubrió la trama de esta
Puesto que se ha demostrado que la situacion de los confederacion detestable, y se cuenlan por centenares
ateos ni es tranquila ni feliz, es un rasgo de crueldad los criminales que ha sido necesario que mueran en el
por su parte el querer comunicar á los demas la duda, cadalso. Cartas sobre la Historia de la tierra y del
la inquietud el descontento y la cólera que los ator hombre por Mr. Deluc., 1779, tom. ... carta 91.
menta. Que se obstinen en permanecer en tal estado, p. 140.
está en su interés; mas ¿por qué han de querer arran Este hecho fué anunciado en tiempo por los pape
car de sus semejantes la idea de un Dios que los con— les públicos, mas no se fijó en él bastante atencion. Si
suela, de una religion que los conduce á la virtud, y se hubiera tratado de un acontecimiento poco favo
de una esperanza que dulcifica sus penas? Al conside rable á la religion, nuestros filósofos le hubieran he
rar el modo como están constituidos la mayor parte cho resonar en la Europa entera. El sabio escritor que
de los hombres, están seguros los ateos de que susprin lo refiere, y que habia sido casi lestigo de él, observa
cipios esparcidos por el mundo, no se aumentarian por con razon que si el ateísmo no produce el mismo efecto
la cantidad de crímenes y el número de malhechores? sobre los hombres laboriosos y tímidos, cuyas pasio
En atencion á lo que acabamos de esponer deberia el nes son dulces, la sociedad debe temelo todo de los
menor peligro detener la mano y cerrar la boca á todo que son perezosos y atrevidos emprendedores, y cu
hombre sensato. yas pasiones son violentas; la irreligion haria de estos
Aun cuando la verdad de la religion no se hubiera hombres unos verdaderos tigres.
demostrado invenciblemente, al menos está autori No les quedaba otro partido que adoptar á los ateos
zada por las leyes; en todas las naciones civilizadas ue el querer ocultar sus indecencias bajo la máscara
se ha empleado el rigor contra los que violan las le ¿ la hipocresía, pretenderse animados de un celo ar
yes atacando á la religion. Porque agrade á los ateos diente hácia el bien de la humanidad, y exigir elogios
considerar estas leyes como injustas, no se sigue que y recompensas por el valor que manifestaron; este es
lo sean realmente, y que no se debe castigará los que el medio porque los ateos coronaron sus esfuerzos.
se sublevan contra ellas. Exigir en este caso una to Dirán, sin duda, que por estas reflexiones tratamos
 ART (188) ART
de hacerlos odiosos y de escitar contra ellos la severi—De aqui tomaron ocasion los ateos para echarnos
dad de los magistrados. No; la Escritura los declara en cara el antropomorfismo espiritual; esto es, el atri
insensatos: aprobamos esta sentencia. No se castiga á buirá Dios ciertas cualidades humanas y el concebir
los hombres que llegan á caer en demencia, pero se á Dios como un hombre Inas perfecto que nosotros.
les pone en parage en donde no puedan hacer daño. Esta es una acusacion falsa, pues que confesamos que
El rey profeta remite á Dios la venganza de sus furo— en Dios, toda perfeccion es infinita, y que lo infinito
res: «Levántate, ó Dios, y juzga tu causa: tén presen escede á todas nuestras concepciones. V. ANTRopo—
tes tus ultrages, los ultrages que te está haciendo de M10RFSM0. -

contínuo una gente insensata. No eches en olvido las

voces y dicterios de lºs enemigos, porque la soberbia Atrieon, contricion imperfecta. Los teólogos es
de aquellos que le aborrecen va siempre creciendo.» colásticos la definen «un dolor y delestacion del peca
Ps. 73, y. 22 y 23. Instrui los por las ¿ de Je— do, que nace de la consideracion de la fealdad del pe
sucristo, mas perfectas aun que las de los antiguos cado y del temor de las penas del infierno». El conci
juslos, no pedimos á Dios mas que la conversion de lio de Trento, ses. 1, c., declara que esta especie
los incrédulos. de contricion, si escluye la voluntad de pecar y con
Ignoramos el motivo por qué se ha tomado en nues tiene la esperanza de alcanzar el perdon de sus cul—
tros dias lanto empeño en justificar á Vanini, ateo cé pas pasadas, es un don de Dios, un movimiento del
lebre, ó por lo menºs para escusarle y hacer aparecer Espíritu Santo, y dispo:e al pecador á recibir la gra
á sus jueces culpables de crueldad. Muchos de nues cia en el sacramento de la penitencia. La opinion re
tros filósofos han tenido á bien hacer su apologia; mas cibida mas generalmente sobre la atrición es que
el interés personal y la conformidad de opiniones no en el sacramento de la penitencia no basta para jus
habrán influido mucho en esta caridad singular? tificar al pecador, á menos que no encierre amor ini
Bástanos observar que Vanini no sufrió la última cial de Dios, por el cual el pecador le ame como ori
pena precisa nente porque era ateo, sino porque pre gen de toda justicia. Esta es la doctrina del concilio
dicaba el ateísmo y seducia á la juventud. Estos dos de Trento, ses. 6, c. 6, y la de la asamblea del clero
crímenes son muy diferentes. Si los areos guardasen de Francia en 1700.
para sí solos su impiedad, nadie se informaria acerca Los teólogos disputan entre sí acerca de la natura
de lo que piensan; mas estos insensatos quieren dog— leza de este amor; unos quieren que sea un amor de
matizar, comunicar á los demas el veneno de que están caridad propiamente dicha: otros sostienen que basta
inicionados, y esto esloquese tiene derecho á castigar. tener un amor de esperanza, y que es imposible es
perar de Dios gracia y misericordia sin esperimentar
A tributos. Cualidades ó perfecciones de Dios. un movimiento de amor.
Aunque la esencia divina perfectamente simple en sí En efecto, cuando un pecador fija su atencion en la
misma escluye toda composicion y toda distincion, bondad de Dios que se digna perdonarnos y recibir—
nuestro entendimiento limitado se ve obligado á dis nos en su sanla gracia , siempre que nos arrepinta
tinguir en Dios diversos atributos ó perfecciones. Unos mos de haberle ofendido, que hagamos de ello una
son llamados atributos metafísicos; tales son la aseidad confesion humilde, y que estemos resueltosá no pecar
ó necesidad de ser, la eternidad, la infinidad la inmen mas, ¿esposible º no sienta en el fondo de su corazon
sidad, la espiritualidad, la inmutabilidad, la simpli un movimiento e amor hácia esla bondad infinita?
cidad, el entendimiento, la voluntad, la omnipoten Parece, pues, imposible el esperar sinceramente el
cia, la ciencia, la sabiduría, etc. Los demas se llaman perdon de nuestros crímenes sin comenzar á amará
perfecciones morales; tales son los que establecen rela Dios como origen de toda justicia, á menos que no se
ciones morales entre Dios y las criaturas inteligentes, sostenga que es posible desear y esperar un beneficio
y que nos imponen deberes morales para con Dios; sin pensar directa ni indirectamente en el bienhechor,
tales son la providencia, la bondad, la santidad, la y sin esperimentar movimiento alguno de reconoci—
justicia, etc. Véase cada uno de estos atributos bajo su miento; asi que esto no es concebible.
nombre particular. Conviene observar que el nombre de atricion no se
En el misterio de la Santisima Trinidad, los atribu halla nien la Escritura, ni en los Padres; que debe su
tos del Padre y del Hijo son llamados atributos relati origen á los teólogos escolásticos, y no le introdujeron
tos porque el uno hace referencia á la idea del otro; sino hácia el año 1220, como lo nota el P. Morin,
no sucede lo mismo con los atributos absolutos de que de penit., lib. 8, c. 2, n. 1. Antes de este tiempo no
hemos hablado; la idea de la inmensidad no es rela se pensó en hacer la anatomía de los sentimientos del
tiva á la de la omnipotencia, etc. pecador en el tribunal de la penitencia. Se suponia
No podemos concebir los atributos de Dios sino por que la voluntad sincera de reconciliarse con Dios era
comporacion con los de nuestra alma, ni espresarlosde ya un principio de amor de Dios.
otra manera; como esta comparacion no es esacta, re
sulta por lo tanto una dificultad insuperable para con— Atricionarios. Nombre que se dá á los teólo
ciliar algunos de estos atributos entre sí: por ejemplo, gos que sostienen que la atricion servil ó concebida
la simplicidad de Dios con su inmensidad, su libertad por un temor servil es suficiente para justificaral peca
con su inmutabilidad. No es menos difícil el conciliar dor en el sacramento de la penitencia.
la presciencia de Dios con el libre albedrío del hom - Este término se toma comunmente en mal sentido,
bre. Mas aunque muchas verdades están demostradas, y se aplica á losquedefendieron, ó que la atricion con
la dificultad de conciliarlas entre sí, solo prueba la de cebida por el temor de las penas elerpas sin ningun
bilidad de nuesto entendimiento. motivo de amor de Dios era suficiente, ó álos que sos
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tenian que esta atricion solo exigia un amor natural Padre dice espresamente que los audianos, en nada
hácia Dios, ó que el temor de los males temporales habian cambiado la doctrina de la lgiesia; lo que no
bastaba para hacerla buena: opiniones condenadas seria cierto si hubiesen atribuido á Dios una forma
por los Papas y por el clero de Francia. V Tewton. corporal.
A trio, en latin atrium, hader ó hacer en he Augsburgo. Confesion de Augsburgo, fórmula
breo; significa en la Sagrada Escritura : 1." El patio ó profesion de fé presentada por los luteranos al em
de una casa; Matth., c. 26, y.69, se dice que San perador Cárlos V, en la dieta celebrada en Augsbur
Pedro estaba sentado en el patio de la casa del sumo go en 1530.
*,

sacerdote, in atrio. 2." La antecámara de un palacio, Esta confesion compuesta por Mélanchthon, estaba
Esther, c. 6, y 5. 3 º La entrada de cualquier edifi dividida en dos partes. La primera contenia veinte y
cio Jerem., c. 32, y. 2 y 12; Luc., c. 11, y . 21. un artículos sobre los principales puntos de la reli
Mas esle término atrio designa ordinariamente las gion. En el primero se reconocia lo que los cuatro
tres grandes estensiones ó recintos del templo de Je primeros concilios generales habian decidido respec
rusalen. El primero era el atrio de los gentiles, por to á la unidad de un Dios y al misterio de la Trinidad.
que se les permitia entrar en él y hacer allí sus oracio El segundo admitia el pecado original, lo mismo que
nes; el segundo era el atrio de Israel, el cual estaba los católicos, á escepcion de que los luteranos le ha
destinado solamente para los israelitas, pero en el que cian consistir en su totalidad en la concupiscencia
no debian entrar sino despues de haberse purificado; y en la falta del temor de Dios y de confianza en su
el tercero era el atrio de los sacerdotes, en él que esta bondad. El tercero comprendia solamente lo que
ba el altar de los holocaustos, y donde los sacerdotes se contiene en el símbolo de los apósto'es, respecto
y los levitas egercian su ministerio. Un simple israe á la encarnacion, á la vida, muerte, pasion , resur
lita no p0dia entrar en dicho atrio sino cuando ofrecia
reccion de Jesucristo, y su ascension. El cuarto es
un sacrificio, en virtud del cual debia poner la mano tablecia contra los pelagianos, que el hombre no
sobre la cabeza de la víctima. puede ser justificado por sus propias fuerzas; mas
Sobre este modelo, la entrada de las antiguas ba— tambien se pretendia en él contra los católicos, que la
sílicas ó Iglesias cristianas estaba tambien precedida justificacion se obraba por la fé sola, con esclusion de
de un gran atrio rodeado de pórticos, en el cual se te— las buenas obras. El quinto estaba conforme con los
nia á los penitentes á quienes se habia prohibido la sentimientos de los católicos, en lo que decia que el
entrada en la Iglesia; y como eslaban á todos vientos Espíritu Santo se comunica á los fieles en virtud de
se le llamaba locus hiemantium. Bingham, Origenes los sacramentos de la ley de gracia ; mas diferia este
ecles., lib. 8, c. 3, S. 5. artículo de la doctrina de los católicos, por cuanto
reconocia en la fé sola la operacion del Espíritu San
Audeamos, Audianos ó Vadianos, he to. El sesto confesaba que la fé debia producir buenas
rejes del siglo IV llamados asi del nombre de Au obras, y negaba, contra los católicos, que estas bue
dio, su gefe, que vivia en Siria ó en Mesopotamia há nas obras sirviesen para alcanzar la justificacion, pre
cia el año 32, y que habiendo declamado contra las tendiendo que solo se hacian por obedecer á Dios. El
costumbres de los eclesiásticos, acabó por dogmatizar séptimo queria que la Iglesia se compusiera solamen
y formar un cisma. te de los escogidos. El octavo reconócia la palabra de
Entre otros errores celebraba la Pascua del mismo Dios y los sacramentos como eficaces, aun cuando los
modo que los judios, y enseñaba que Dios tenia una que los confieren sean malos é hipócritas. El noveno
figura humana, á semejanza de la cual habia sido el sostenia contra los anabaptistas la necesidad de bau
hombre criado. Segun Teodoreto, creia que las tinie tizar á los niños. El décimo profesaba la presencia
blas, el fuego y el agua no habian tenido principio. real del cuerpo y sangre de Jesucristo en la Eucaristía:
Sus secuaces daban la absolucion sin imponer nin— El undécimo admitia, con los católicos, la necesidad
guna satisfaccion canónica, contentándose con eger de la absolucion para la remision de los pecados, pe
citar á los penitentes en la lectura de los libros sa ro desechaba la de la confesion. El duodécimo conde
grados y apócrifos. Observaban una vida muy reti— naba á los anabaptistas que defendian la inamisibili
rada, y no asistian á las asambleas eclesiásticas por— dad de la justicia, y el error de los novacianos acerca
que decian que los impúdicos y los adúlteros eran de la inutilidad de la penitencia; pero negaba, coara
tambien recibidos en ellas. Sin embargo, Teodoreto la fé católica, el que un pecador arrepentido pudiese
asegura que se cometian muchos crímenes entre ellos. merecer por medio de obras de penitencia la remi
S. Agustin los llama vadianos, y dice que los que sion de sus pecados. El décimo tercio exigia la fé ac
vivian en Egipto comunicaban con los católicos. Adin tual en todos los que reciben los sacramentos, aun en
que hubiesen creado algunos obispos, su secta fué los niños. El décimo cuarto prohibia la enseñanza
poco numerosa; su heregía no subsistia ya, y apenas pública en la Iglesia, como igualmente el adminis
se conocia su nombre en tiempo de Facundo, que vi irar los sacramentos sin una ovacion legítima. El dé
via en el siglo V. cimo quinto manda guardar las fiestas y observar las
El P. Petavio pretende que S. Agustin y Teodore ceremonias. El décimo sesto consideraba las ordenan
to comprendieron mal la opinon de los audianos, y lo zas civiles como legítimas, aprobaba los magistrados,
que de ellos habla S. Epifanio, que no les atribuye, di; la propiedad de bienes y el matrimonio. El décimo
ce, otras opiniones que el creer que la semejanza del séptimo reconocia la resurreccion futura, el juicio
hombre con Dios consistia en el cuerpo. En efecto, el general, el paraiso y el infierno, y condenaba los erro
testo de S. Epifanio no contiene mas que esto, y este res de los anabaptistas acerca de la duracion finila de
TOMO I, 30
 AUG . 190 AUG

las penas del infierno, y respecto del pretendido rei ¿ para dar
una edicion auténtica de esta confesior,
nado de Jesucristo, mil años antes del juicio. El déeclararon al mismo tiempo que la que elegian no
cimo octavo declaraba que el libre albedrío no era desaprobaba las demas, y particularmente la de Wur
suficiente en punto á la salvacion. El décimo nono, temberg, hecha en 1540. Los sacramentarios creian
manifestaba que aun cuando Dios hubiese criado al tambien hallar en ella todo cuanto les favorecia. Esta
hombre y le conservase, no era ni podia ser la causa es la razon porque los Zuinglianos, dice Mr. Bossuet,
de su pecado. El vigésimo, que las buenas obras no la llamaban irónicamente la caja de Pandora, de don
eran enteramente inútiles. El veinte y uno prohibia de salian el bien y el mal; la manzana de la discordia
invocar á los santos, porque esto era, decia, derogar entre las diosas; un grande y vasto manto en que
la mediacion de Jesucristo. p0dia ocultarse Satanás como tambien el mismo je
La segunda parte que contenia únicamente las ce sucristo. Estos equívocos y estas paradojas, en donde
remonias y usos de la Iglesia, que los protestantes tra todos pensaban hallar cuánto les convenia, prueban
taban de abuso, y que les habian obligado, decian, á que la confesion de Augsburgo era una obra mal con
separarse de ella, estaba comprendida en siete artí cebida, mal digerida, cuyas partes se desmentian y
culos. El primero admitia la comunion bajo las dos no formaban un sistema bastante uniforme de reli
especies, y prohibia las procesiones del Sanúsimo Sa gion. Calvino fingió recibirla con el objeto de apoyar
cramento. El segundo condenaba el celibato de los su partido naciente, mas en el fondo formó acerca de
ella un juicio muy poco favorable.
sacerdotes, religiosos, religiosas, &c. El tercero jus
tificaba la abolicion de las misas rezadas, y queria 3." Al mismo tiempo que los gefes del partido lu
que se celebrase en lengua vulgar. El cuarto exigia terano presentaban esta confesion de fé en la dieta de
que se relevase á los fieles de la obligacion de confe— Augsburgo, cuatro ciudades imperiales, Strasburgo,
sar sus pecados, ó por lo menos de enumerarlos esac Constanza, Neminga, Landaw, las cuales habian
la y circunstanciadamente. El quinto impugnaba los abrazado las opiniones de Zuinglio, presentaron tam
ay unos y la vida monástica. El sesto desaprobaba bien la suya, que habia sido compuesta por Martin
abiertamente los votos monásticos. El séptimo, en fin, Bucero, y que fué tambien considerada como un pro
establecia, entre la potestad eclesiástica y la secular, digio de doctrina por el partido zuingliano, ó calvi
una distincion que se dirigia á quitar á los eclesiásti— nisla : lo que no pidió que Bucero firmase la confe—
cos toda potestad temporal. sion de Augsburgo y su defensa; nada costaban las fir
Esta confesion de fé estaba firmada por el elector mas á los pretendidos reformadores desde el momento
y el duque de Sajonia, por el marqués de Brandebur— to en que les eran útiles. El mismo Melanchthon, que,
go, por los duques de Leneburgo, por el langrave de en la segunda parte de la confesion de Augsburgo,
Ilesse, por el príncipe de Anball, por el magistrado condenaba tan altamente las ceremonias de la Iglesia
de Nuremberg y por el de Reutlinga. romana, lo hizo contra su propia opinion y única
Presentaremos sobre esta materia algunas obser— mente por complacer á Lutero. Se sabe ademas que
vaciones. 1." Parecia de todo punto necesario que esta ¿o consideraba estas ceremonias como bas
confesion de fé, ensalzada por Mosheim y por los lu tante indiferentes, y no juzgaba que este fuese un mo
leranos como una maravilla, fuese una obra maes tivo, legítimo para promover un cisma en la Iglesia
tra de teología; sin embargo, el orden falla en ella y católica; en lo mismo conviene Mosheim, Ibid., c.,
tampoco se guarda ilacion en las materias. Lo que S., en la nota. Asi los príncipes protestantes, que
hace referencia á las buenas obras, por egemplo, está seguramente no eran teólogos, y por otra parte
dividido en dos ó tres artículos; se dice en uno que no querian tener respeto alguno al Papa, juraron en
las buenas obras para nada contribuyen á la justifi el fondo sobre la palabra de Lutero. A pesar de no
cacion; en otro que no son inútiles, y no se esplica haberse querido admitir á este en la dieta ni en las
conferencías, porque era demasiado violento revol
en que consiste su utilidad. El quinto artículo decide
que los sacramentos dan el Espíritu Santo, y que la toso, sin embargo, permanecia en Coburgo en las cer
operacion del Espíritu Santo consiste en la fé sola; se canias de Augsburgo, y los protestantes nada hacian
sostiene en el artículo noveno que es necesario, sin que no fuese por inspiracion suya. Mosheim, Ibid.,
embargo, bautizar á los niños; mas de qué fé son ca c. 3, S.2, nola del traductor sobre el S. I. Si le hu
paces los niños? Cuál puede ser en ellos la operacion biera agradado ser sacramentario ó anabaptista, to
del Espíritu Santo? Mayor número de contradicciones dos los luteranos lo serian al presente.
podriamos aun hacer notar. .." Los Zuinglianos ó calvinistas, los anabaptis
2.". Mosheim falta á la verdad cuando dice que tas y aun los socinianos, si su partido hubiera ya es
todos los protestantes adoptaron dicha confesion como lado formado por entonces, no hubieran tenido menos
regla de su fé. Hist., ecles. del siglo XVI, sec. 1.º derecho que los luteranos para pedir el libre egerci
c. 3, S. 2. Los mismos luteranos no la sostuvieron en cio de su religion; sin embargo, estos últimos no
todos sus punlos, lal como acabamos de estractarla, quisieron tolerarlo en donde ellos mandaban : qui
sino que la alteraron y variaron en muchos, segun las siéramos saber por qué el emperador y los príncipes
circunslancias y los nuevos sistemas que adoptaron del imperio ¿ mas obligados á permitir el li
sus doctores acerca de los diferentes punios de doctri bre egercicio del luteranismo que el de las demas
na que habian abrazado anteriormente. Con efecto, sectas. En verdad, qué necesidad habia de confe
se habia publicado de tantos modos, y con diferencias sion y de fé? Los luteranos debieron haber seguido
tan considerables en Wurtemberg y en otras partes, una conducta mas franca y decorosa; debian haberse
á la vista de Melanchthon y de Lutero, que cuando limitado á decir á la dieta: «Nada teneis que ver en
en 1561 los protestantes se reunieron en Naumbur—. nuestras opiniones ni en nuestra doctrina, no debe—
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mosdar cuenta de esto sino á Dios solo; pretendemos unjóven teólogo en algunas universidades, y particu
tener derecho para servirle segun las luces de nues larmente en la de París, el dia en que un licenciado re
tra conciencia; con el bien entendido que concedemos cibe la borla de doctor, y al que preside este mismo
el mismo derecho á los demas». Pero no; los luteranos licenciado inmediatamente despues de la recepcion
querian ser tolerados é intolerantes, gozar de la li de la borla.
bertad y no concedérsela á nadie, dominar solos, ar El nombre de esta tesis se deriva de la voz aula ó
rojar y proscribir á lodo el que no fuese luterano, y á sala, pues que se verifica en una sala de la universi—
creerlos; se han violado todas las leyes divinas y hu dad, y en París en una sala del palacio episcopal.
manas, rehusándoles lo que pedian. Este era tambien V. GRADo, DoctoR.
el espíritu de los calvinistas v de todas las demas sec
las protestantes. -
Auricular, se dice de la confesion que se hace
5." . Los luteranos aparentaban desear un concilio en secreto al oido. V. CoNFESIoN.
general; Moshein declama contra Clemente VII, que
parecia temerle, y el cual retardaba su convocacion Auspicio. V. ADivINAcioN.
bajo diferentes pretestos; mas cuando vieron que Pau
lo III consentia en convocarle, protestaron con anti Austeridades. V. MorTIFICACION.
cipacion contra todo concilio que fuese reunido por el
papa, especialmente en Italia, y pretendieron que el Auténtico. Se llama libro auténtico aquel que
emperador tenia derecho para convocarle en Alema ha sido escrito por el autor cuyo nombre lleva, y al
nia, bajo pretesto de que en cualquiera otra parte ten cual se atribuye comunmente.
dria el papa demasiada autoridad. Mosheim, ibid., Una historia, una narracion, puede ser verdadera ó
S. 8, y 9, notas del traductor sobre los 3. 6 y 9. Mas conforme á la verdad de los hechos, sin que por esto
preguntamos con qué título los obispos de España, de sea auténtica, y sin que haya sido escrita por el autor
llalia, de Francia y de Inglaterra podian ser obliga á quien se atribuye; basta conque esté compuesta por
dos á asistirá un concilio convocado en Alemania por un escritor suficientemente instruido y sincero, cual
orden del emperador, cuando estaban todos persua quiera que sea. Porque el autor de un libro no sea co
didos de que correspondia al papa anunciarlo y reu— nocido, no se deduce que todo cuanto dicho libro con
nirlo? Por qué razon debian los soberanos católicos tiene sea falso y fabuloso, antes bien puede ser de tan
consentir mas bien en la celebracion de un concilio to peso y autoridad como si el autor fuese ciertamen -
general en Alemania, que los príncipes alemanes en le conocido.
que se celebrase en Italia? Por qué los obispos de estos Con efecto, entre los libros sagrados hay algunos,
diversos reinos podian esperar gozar de mayor liber con especialidad en el antiguo Testamento, cuyos au
tad en Alemania, dividida en aquel tiempo por las tores no son ciertamente conocidos; solo se sabe que
facciones, que los alemanes en Italia donde todo es— han salido de una mano respetable, puesto que los
taba tranquilo? Existe, por ventura, alguna prueba de antiguos, teniendo mayor disposicionque nosotros pa
que en el concilio de Trento, los obispos franceses, ra descubrir el origen de los dichos libros, los dieron
españoles 6 alemanes hayan sido molestados por la entera fé, y los han citado como autoridad. Acerca de
antoridad del papa, que no tuviesenla libertad de emi esta materia, la tradicion es la única guiaá pode
tir sus opiniones, ó que se les haya obligado á firmar mos atenernos. Por lo que toca á los libros del nuevo
algun decreto contra su propio parecer? Es, pues, cla Testamento, se sabe ciertamente que son auténticos y
ro que los luteranos no querian concilio, á menos que ue han sido escritos por los autores cuyos nombres
no estuvieran seguros de ser en él los señores; esto ¿
está demostrado por la misma narracion de Mosheim. Para que un libro sea considerado canónico, inspi
6." Finalmente, supongamos que el concilio hu rado, divino, reputado comola palabra de Dios, no bas
biera sido convocado y reunido en Alemania: era ta que sea auténtico, que haya sido escrito por algu
reciso llamar allí, para que asistiesen á él, no solo á no de les apóstoles ó por uno de sus discípulos inme
os católicos, sino tambien á los anabaptistas, calvi diatos, , es ademas necesario que la Iglesia lo haya
nislasy anglicanos, aun los griegos cismáticos, los nes adoplado como tal, y que la tradicion antigua depon
torianos, los jacobitas y los armenios no tenian menos ga en su favor. No se hallaría la Iglesia en estado de
derecho para asistir á este concilio que todas estas asegurarnos la doctrina cristiana, sino hubiera tenido
nuevassectas. No preguntamossilos asiáticoshubieran la autoridad de enseñarnos, sin peligro de errar, cuá
sido muy obedientes á las órdenes de un emperador les son los libros que debemos considerar como re
de Alemania, sino si las sectas protestantes se hubie glas de nuestra creencia. Las reglas de la crítica pue.
ran convenido mejor en un concilio que por otra par den servir para descubrir si un libro ha sido escrito
te no han celebrado. Los protestantes no procuran por tal ó cual autor; mas no puedenenseñarnos si este
mas que hacer concebir ilusiones, cuando se lamen libro es ó no regla de fé; á la Iglesia es á quien cor—
tan de la manera con que los católicos se condujeron responde ver si contieneó no la doctrina de Jesucristo.
con ellos. Bossuet, Hist. de las var., l. 3. Esta sociedad santa ha sido instruida de viva voz por
Hállase la confesion de Augsburgo en la coleccion los apóstoles, antes de haber recibido sus escritos, y
impresa en Ginebra en 1654; pero no se sabe si está ningun libro puede suplir completamente la enseñan
alli tal como fué presentada en 1530, puesto que fué za pública y siempre subsistente de la Iglesia. V. Au
cambiada muchas veces. ToRIDAD DE LA IGLESIA, CANoN, l NFAllBILIDAD.
o S". Entre las muchas y graves obras que pueden
Aulico. Nombre de un acto ó tesis, qae sostiene consultarse acerca de la autenticidad de los libros
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santos merecen atencion particular la Hermenéuti de los originales ó de los autógrafos. Nosotros creemos
ca sagrada, escrita en latin por J. H. JANSSEN, to igualmente que el ejemplar de la ley, que bajo el rei
mo 1, cap. II, edic. de París, 183; las profundas nado de Josías se halló en el Templo, era el origi
metodicas investigaciones de MELCIIon CANo en el nal escrito por la propia mano de Moisés; IV. Reg.
ib. 2.º de sus Lugares teológicos; las no menos sa c. 22. y.8.
bias y eruditas pruebas del jesuita PERRoNE, alega
das en sus prelecciones teológicas, seccion 1." de la Auatores eclesiásticos. Este es el nombre
segunda parte de los Lugares teológicos, en donde general que se dá á los escritores que han aparecido
trata de la palabra de Dios escrita; las Instituciones en el cristianismo despues de los apóstoles, compren
teológicas que acaba de publicar el obispo francés diendo en este número á los Padres apostólicos y á los
Bouvier, y la Teologia dogmática del P. CuARMes, no de los siglos siguientes; frecuenteniente se designa
table por su método y precision. Y en clase de dis con este título á los que escribieron despues de San
cusiones especiales pueden leerse las , Obsercaciones Bernardo, que falleció el año 1153, y el cual es con
preliminares de M. Du-Clot, tanto sobre el antiguo, siderado como el último de los Padres de la Iglesia.
como sobre el nuevo Testamento, las cuales se hallan El año 392, S. Gerónimo formó el Catálogo de Es
en su conocida obra Vindicias de la Biblia. Cien otros critores ilustres, en el que comprendió aun á los após
autores de mérito son citados por el P. PERRoNE acercatoles y á los evangelistas, y habló de sus escritos. Eu—
de este punto, en el lugar de que se ha hecho men sebio hizo lo mismo en su Historia eclesiástica, escri
cion. El Curso de literatura de LA-HARPE trae tam la antes del año 326; mas ni uno ni otro pretendie
bien un precioso discurso sobre el punto de que trata ron dar una noticia esacla de todos cuantos habian apa
este artículo. La palabra de Dios, la divina revela - recido. En 836 Focio, hallándose todavia en el esta
cion, su autenticidad, su autoridad, su integridad, do laical, compuso su Biblioteca en la que incluyó el
su irrecusable testimonio, los divinos caracteres de estracto de 279 obras de distintos autores tanto ecle—
ue está revestida, su inalerable fijeza y lo sublime siásticos como profanos, muchas de las cuales no han
e sus máximas, unido á la grandeza del objeto so llegado á conservarse hasta nuestros dias. El carde
bre que versan las divinas, manifestaciones hechas á nal Belarmino, que falleció el año 1621, formó un Ca
los hombres, todo á la vez ha sido puesto en tela de tálogo de autores eclesiasticos, que porcierto no es muy
juicio por la soberbia del entendimiento humano; to esacto; desde entonces hasta el presente se han com—
do ha sido impugnado y escarnecido; todos los ardi puesto varios catálogos mas amplios y completos.
des y las argucias de la mala fé, con la pedante os Gillelmo Cave, sabio inglés, publicó en 1688 una
tenlacion de la ciencia que hincha, se puso tambien Historia literaria de autores eclesiásticos, en un vo
en contribucion para derrocar la autenticidad de los lumen en folio, que despues se reimprimió en dos vo
libros santos; mas tan preparados como tercos com— lúmenes, aumentados y enriquecidos con nuevas ob
bates han venido á ceder en mayor gloria y justa vin servaciones; esta historia alcanza hasta el año 1517.
dicacion de las palabras de Dios que no pasan; asi Le Nain de Tillemonl en sus Memorias sobre la histo
como dan testimonio de las miserables empresas ria eclesiastica, en diez y seis volúmenes en ...", inclu
del orgullo filosófico, que se disipan lastimosamente e solamente los autores de los seis primeros siglos
despues de haber dejado huellas de horror y de es n 1686, el doctor Dupin comenzó á publicar el pri
pant0. mer volúmen de su Biblioteca de escritores eclesiásti
cos, la que se compone de cincuenta y ocho volúme
Auténtico. Significa algunas veces lo que dá nes en 8."; mas se la ha juzgado digna de censura en
antoridad: y en este sentido es como el concilio de muchos puntos, Dom Remigio Cellier, benedictino,
Trento declaróá la vulgata auténtica. V. VuLGATA. dió á luz una obra del mismo género, la cual es mas
esacta, en veinte y cuatro volúmenes en '."
Autocéfalo. Término derivado del griego Au—
tos, el mismo y kEPHALE, gefe; significa el que no Autores profanos. Ecsiste una cuestion bas
reconoce gee alguno. Se creeria desde luego que tante curiosa, á saber, si los autores profanos, por
se ha querido designar con este término las sectas de egemplo, los poelas, los filósofos y los legisladores,
independientes; mas este título se daba á los obispos han lomado de los judíos y de sus libros los conoci
que no estaban sujetos á ningun metropolitano, y á mientos que manifiestan en sus escritos, ó si por el
los metropolitanos que no reconocian la jurisdicion contrar o, fué Moisés quien tomó de los egipcios sus
de un patriarca. ideas acerca de la Divinidad, de la moral y de la le
gislacion. Hay sobre este punto una disertacion de
Aunto de fé. V. INQUIsiclox. Calmet, Biblia de Aviñon, tomo 3.ºp. 8 y sig.
La primera opinion parece haber sido seguida por
Autógrafo. Nombre formado del griego Autos, muchos antiguos Padres de la Iglesia, tales como San
el mismo, y de GRAPHo, yo escribo; se llama así á un Justino, S. Clemente de Alejandria, Orígenes, Ter
libro que ha sido escrito por la propia mano del tuliano, S. Cirilo de Alejandria, Eusebio, Teodoreto,
autor. Pedro, obispo de ¿ refiere que en S. Ambrosio y San Agustin: mas esta opinion está es
el siglo VI se conservaba todavia en Efeso el autó puesta á graves dificultades. -

grafo ó el original del Evangelio de S. Juan, IDvo 1." No vemos que ningun antiguo autor griego
JEy RoN Chron. Aler., á Radero editum. Cuando Tertu tuviera conocimienio de la lengua hebrea, en la cual
liano dice que en las Iglesias fundadas por los apos estaban escritos los libros de los judios. Estos libros
toles se leen sus escritos auténticos, parece que habla no han sido traducidos en griego sino hácia el año
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290 antes de Jesucristo; 246 años despues del primer absurdo, de la idolatría, etc. tan puras y lan subli
regreso de la cautividad. Los mismos judios no co mes como las que Moisés atribuye á sus abuelos.
menzaron hasta este tiempo á usar la lengua griega. 4." Del mismo modo la mayor parte de las cere
Pitágoras, Platon, &c., habian fallecido mucho tiem monias religiosas, los sacrificios, las ofrendas, las pu
po antes de esta época. Por consiguiente es suma rificaciones, las abstinencias, los símbolos de la pre
mente dificil que los griegos pudieran haber con sencia de Dios, etc., fueron comunes á lodas las na
versado con los judios y aprender de ellos cosa al ciones; se habian empleado por los patriarcas en el
guna. culto del verdadero Díos antes de ser profanadas por
2." Demetrio Falerio, el falso Aristeo, el judio los politeistas egipcios, idumeos, cananeos, etc.; Moi
Aristóbulo, Filou y Josefo no parecen ser de la mis— sés, al reducir todas estas ceremonias á su destino
ma opinion de los Padres acerca de este punto de he— primitivo, no hizo mas que seguir las lecciones de sus
cho, y no tenemos motivo alguno sólido para recusar antepasados y las órdenes espresas de Dios. No tuvo
su testimonio. -

pues necesidad de tomar nada de los egipcios.

3.". Los mismos Padres que hemos citado no ha
blan de un modo constante y uniforme; dicen mu— Autores sagrados. Son llamados asi losescri
chas cosas que nos hacen juzgar que sobre este objeto tores inspirados por Dios, de cuyas plumas salieron los
tenian mas bien dudas y sospechas, que un dictámen diversos libros de la Sagrada Escritura, tanto del an
fijo y determinado: tiguo como del nuevo Testamento, tales como Moi
.." Algunas relaciones vagas de conformidad en sés, los historiadores que le siguieron , los profetas,
tre algunas máximas ó espresiones de los antiguos fi los apóstoles y los evangelistas, para distinguirlos de
lósofos, y las verdades reveladas en los libros santos, los autores eclesiásticos.
no bastan para probar la supuesta adquisicion. Es
tos escritores pudieron sacar lo que dicen, ó de las Autoridad, derecho de mandar. La primera
luces naturales de la razon, ó de la tradicion gene— cuestion que se presenta es la de saber cuál es el ori
ralmente propagada por todas las naciones, la cual gen de este derecho. Nuestros filósofos modernos, y
asciende hasta la revelacion primitiva, como lo ha— algunos jurisconsultos que los copian, sienlan por
bian hecho Job y sus amigos. principio, que ningun hombre ha recibido de la natu
La segunda cuestion se ha decidido con demasiada raleza el derecho de mandar á los demas. La libertad,
ligereza por muchos autores modernos. Han afirmado dicen, es un dondel cielo, cada individuo de una mis
aventuradamente, que Moisés habia tomado toda su ma especie tiene el derecho de gozar de él tan luego
legislacion de los egipcios, sin haber podido citar como como goza de su razon: de aquí deducen que un hom
prueba de su aserto otra cosa mas que algunas cere bre no puede estar sujeto á otro sino en virtud de su li
monias de los judios, que, segun los autores griegos, bre consentimiento, dado en consideracion de los bene
se praclicaban tambien entre los egipcios; mas se ficios que ha recibido, ó que espera recibir: Sin duda
pueden hacer muchas reflexiones que desvanecen estos disertadores entienden por la naturaleza á Dios
esta pretendida conformidad. que es el autor de ella, y por libertad, la independen
1." Los griegos son muy modernos para que pue cia de loda la autoridad humana. Nosotros defendemos
dan darnos razon de los usos que seguian los egipcios que estos principios y sus consecuenciasson otras tan
en el siglo de Moisés, el cual vivió mas de mil años las falsedades tan opuestas al buen sentido y á la sa
antes: siendo ademas cierto que los antiguos egipcios na filosofía, como á las lecciones de la revelacion.
no habian dejado nada por escrito, ellos solos cono Lo demostraremos desde luego con dos verdades in
cian sus geroglíficos. Moisés, lejos de manifestar deseo contestables: una es, que por la naturaleza, esto es,
alguno de copiar á los egipcios, prohibe á su pueblo por la voluntad y la intencion del criador, el hombre
imite las supersticiones de Egipto; les habria tendido está destinado para la sociedad: esto está probado por
una red si les hubiese puesto á la vista el mismo ce la constitucion, por las necesidades y por las incli
remonial que habian visto seguir en Egipto. naciones del hombre, y el mismo Dios dijo despues
2." Moisés dice que el culto que los israelitas de de haberle criado: No es bueno que cl hombre esté so
bian practicar no podia dejar de parecer abominable lo»; Gén., c. 2, y 18. La olra es, que ninguna so
á los egipcios. Erod. c. 8. y.26. Se sabecuán indig ciedad puede subsistir sin subordinacion, esto es tan
nado se puso luego que vio á los hebreos imilar en el evidente como un axioma geométrico; por consiguien
desierto el culto del Dios Apis, y adorar el becerro te, Dios, fundador de la sociedad, es tambien el autor
de oro. No les permite fraternizar con un egipcio ó de toda autoridad. Desafiamos á nuestros adversarios
con un idumeo hasta la tercera generacion. Deut. á que echen por tierra es le raciocinio. Dios no ha
c. 23, y.7. y 8. La antipatía entre estas naciones y esperado de modo alguno el consentimiento del hom
los judios ha sido constante é idéntica en todos los si bre para someterle á la autoridad, como ni para desti
glos. Pero los autores griegos y latinos, la mayor par narle á la sociedad, este consentimiento no es mas ne
le muy mal instruidos, han confundido importuna cesario para lo uno que para lo otro. Es un absurdo
mente los ritos de los judios con los de los egipcios. mirar á los hombres como unos seres nacidos fortui—
3." . La doctrina de Moisés acerca del dogma y la tamente del seno de la tierra, aislados, independien
moral ha sido precisamente la misma que la de los pa tes, sin ninguna relacion mútua, libres de toda obli
triarcas sus antepasados; por consiguiente no tuvo gacion y de todo deber natural; esta hipótesis huele
necesidad de aprenderla de estrangeros. No se halla al materialismo mas grosero. Si el hombre al nacer no
rán jamás entre los egipcios unas nociones de la crea tuviera deberes, tampoco tendria derechos; y tan im
cior, de la providencia, de la unidad de Dios, del posible le es adquirirse un derecho como imponerse
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un deber, á menos que uno y otro no sean ratificados deber importante inmediatamente despues del man
anteriormente por la ley eterna del criador. dato de tributarle un culto. Ecod., c. 20, y. 12.
Examinemos todas las especies de sociedades, que Se nos objeta que la autoridad paternal tiene sus
el hombre puede formar, y veremos salir del mismo límites: mas quién lo duda? Si no los tuviese, se opon
origen la autoridad conyugal, paternal y doméstica, dria al fin para que se concedió. Dios, sabiduría eter
la autoridad civil y política, la autoridad eclesiástica na, no se contradice jamás en lo que hace: estableció
ó religiosa. El hecho y los principios, la conducta de la autoridad de los padres y madres, á fin de intere
Dios y su palabra, se unen constantemente para de Sarlos en la conservacion de sus hijos; y por consi
mostrar lo absurdo de la teoría de nuestros filósofos. guiente no les ha concedido el derecho de destruirlos;
habiéndoles prescrito ciertos deberes, por lo mismo
Autoridad conyugal, paternal y do— ha limitado su autoridad, y lo mismo se verifica res—
mméstica. Esta autoridad resulta de la sociedad entre pecto de toda otra cualquiera autoridad. Esta es por
el marido y su esposa, entre el padre y sus hijos, entre consiguiente bienhechora ó benéfica por su naturale
el amo y sus criados; Dios se esplicó con bastante cla za, esto es, segun la intencion de Criador; y la es—
ridad acerca de los deberes que son inseparables de lableció para obrar el bien, no para obrar el mal.
ellos. «No es bueno, dice el Señor, que el hombre esté Mas luego que el depositario de la autoridad abusa de
solo, hagámosle una ayudasemejante á él». Gén., c. 2. ella, no le despoja Dios de su derecho por esta causa,
y. 18, Dios forma una muger de la sustancia misma porque de semejante despojo resultaria un mal ma—
de Adán; la muger es por consiguiente una ayuda or, y cuando este depositario peca violando sus de
concedida al hombre, y no una igual que tiene dere beres, no nos dá derecho para pecar y quebrantar los
cho para disputarle el imperio; él es el tronco del que ntieslros.
ella salió; la snperioridad de fuerza, de entendimien Es de todo punto falso, que en el estado de natu—
to y de valor concedida al hombre, demuestra la in raleza, la autoridad paternal cesase tan luego como
tencion del Criador. los hijos se hallan en disposicion de saberse gober
Despues del pecado, dijo Dios á la muger: «Tu es— nar: ¿cuál es pues este estado imaginario de natura—
tarás bajo el dominio de tu marido, y él ejercerá su leza opuesto á aquel en que Dios crió al género huma
autoridad sobre tí». c. 3, y. 16. No pidió Dios el con no? Puesto que toda obligacion es recíproca, el pa—
sentimiento de la muger para someterla á su esposo, dre, en este mismo estado ficticio, estaria dispensado
y si ellos hubieran entre sí estipulado lo contrario, de conservar y educar á su hijo, y podria disponer de
Dios habria anulado el contrato. él del mismo modo que si fuera un hijo de un animal:
En el momento mismo en que les concede la fecun asi es como opinaban los griegos y los romanos; mas
didad, les dá la autoridad sobre sus hijos: «Creced y no se avergüenzan de querer hacernos retroceder has
multiplicaos , y henchid la tierra, y enseñoreaos de la el punto de nivelarnos con estos gentiles.
ella». c. 1,ºy.28. Así el derecho de someter á los Para sostener esta detestable moral, nuestros filó
hijos está unido al poder mismo de darlos á luz, y esta sofos han avanzado mas: dicen que la cualidad mis
sumision á la que Dios condena á los hijos es ya un ma del Criador no dáá Dios el derecho de mandará
beneficio para ellos; por el mero hecho de prescri las criaturas, que es necesario ademas añadir á la
birles deberes, les concede derechos, puesto que man creacion los atributos de sabiduria y de bondad. Pues
da á sus padres y madres que los conserven. Desde qué ¿la creacion no es por sí misma un efecto de
el momento de la concepcion, se prohibe al padre y bondad? ¿El ser, la conservacion, no son ya un be
á la madre destruir la obra de Dios; este es un depó— neficio, y el mandalo de Dios no es tambien otro?
sito del cual le son responsables. Así es que Eva, ha— Si hubiéramos de dar crédito á los raciocinios de
biendo llegado á ser madre, esclama: «He adquirido nuestros filósofos, diriamos que Dios nos hacia un
la posesion de un hombre por merced de Dios». c. . agravio al darnos leyes; que una libertad ilimitada
y.1 "Considera á su hijo como un bien que la per nos seria mas ventajosa que una libertad arregla
tenece, y un bien precioso, que ha recibido por mer da y limitada por la ley divina, y que seriamos mas
ced de Dios, para cuya conservacion debe dedicar dichosos, si Dios, despues de habernos criado, nos
todos sus esmeros. Por consiguieute, ¿dónde ecsistiria hubiera dejado entregados á nosotros mismos. Es pre
la justicia y la reciprocidad, si el padre y la madre ciso tener un corazon muy depravado para pensar y
estuvieran obligados por derecho natural á alimentar, raciocinar asi. «La ley del Señor, dice el rey profeta,
educar y conservará un hijo, y este no les debiese es la rectitud, la sabiduria y la justicia misma; es el
nada desde que se hallase en estado de pasarse sin consuelo de nuestro corazon, la luz que nos guia, la
ellos? ¿Esperarémos á que este hijo consienta, por re mano que nos conduce, etc.; es un tesoro mas pre
conocimiento, á respetarlos y obedecerlos? Dios ha cioso que todas las riquezas del universo; y constitu
estipulado con anterioridad respecto al género huma ye la ¿ y el único verdadero placer de la vida».
no todo entero; y el efeclo de esta ley irrevocable, Salm. 18. y. 8. -

fundada en una esacta justicia, no puede ser frustrada Apesar de todo cuanto digan en contrario, la crea
por ninguna convencion. cion dá el derecho de destruir como igualmente el de
La obligacion de honrar á los padres y madres, y conservar; por consiguiente dá, con mayor razon el
de obedecerlos, se confirma por el castigo de Cam, derecho de mandar, y Dios no necesita absolutamen
c-9, y. 25. y por la historia toda de los patriarcas; te nuestro consentimiento ni para lo uno ni para lo
Dios une sus beneficios á la bendicion que dan á sus otro. Bien pronto se tratará quizá de enseñarnos, que
hijos, y castigos á las maldiciones que pronuncian; cuando Dios no nos conceda todo el bien que desea
lan luego como dicta su ley á los hebreos, coloca este mos, tenemos derecho para sublevarnos contra él.
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En las primeras edades del mundo, un padre que nacimiento hasta la pubertad, los accidentes á que
contaba muchos siglos de vida, que veia cinco ó seis está espuesto por otra parte, las mismas faltas que
generaciones de sus descendientes, debia será sus ojos puede cometer son un título de dependencia para to
un personage muy respetable. ¿No podian conside da su vida. Si es la naturaleza quien establece esta
rarse sus deseos como otras tantas leyes? Por otra dependencia, ella es tambien, por consiguiente, la que
parte, persuadidos los patriarcas de que la fecundi establece la autoridad: la una no puede concebirse
dad es un don de Dios, de que los hijos son un depó sin la otra.
sito de que pedirá cuenta, que veian en esta numero A esta voz imperiosa de la naturaleza no ha deja—
sa familia su fuerza y el presagio cierto de su pros do Dios de añadir una ley positiva; la Escritura, ha
peridad, debian amarla tiernamente. Asi la potestad blando de nuestros primeros padres, dice, que Dios
paterna, independiente en aquel tiempo de toda ley mandó á cada uno tener cuidado de su prójimo, man
civil, estaba templada por el afecto natural, por el davit illis unicuique de proacimo suo. Ecles., c. 17,
interés y por la religion; la Escritura no nos presen y. 12. Por consiguiente, mandó tambien al que reci
ta ejemplo alguno de que un padre haya abusado de biere semejantes beneficios, honrase, respetase y sir
dicha potestad. viese á su bienhechor; Dios no ha contado con el
Mas vemos por la historia de Judá y de Thamár, consentimiento libre de uno ú otro para imponerles
que un gefe de familia tenia derecho de vida y de esta obligacion. Luego es falso que la autoridad con
muerle sobre cada uno de sus miembros. Gén., c. 38, yugal, paternal y doméstica esté fundada sobre un
y. 24. Era preciso que asi fuese, puesto que no ha contrato; lo está en la ley divina, natural y positiva,
bia entonces ninguna otra potestad pública mas que la anterior á todo convenio.
autoridad paternal y doméstica. En su origen, esta autoridad no era ilimitada,
Luego que esta sociedad se aumentó con la ad— puesto que la misma ley que la estableció la prescri
quisicion de un número de esclavos, el gefe de fa— bia ciertos límites; mas era absoluta en el sentido de
milia ejercia sobre ellos, por derecho natural, la que no habia sido restringida por ninguna ley huma
misma autoridad que sobre sus hijos. En la pala na; no habia mas ley superior á ella que la divina;
bra EscLAviTUD probaremos que, en su origen, este dicha autoridad se estendia á todo cuanto era nece
estado no fue contrario ni al derecho natural de la sario para la conservacion y el bienestar de la so
humanidad, ni al bien comun; que la libertad civil ciedad doméstica. Desde que se estableció la sociedad
de los siervos era incompatible con la vida errante de civil y leyes humanas, la autoridad paternal debió
los primeros hombres, y que no llegó á ser un bien, estar subordinada á la potestad pública, por la mis
sino despues de haberse establecido la sociedad civil. ma razon de que el interés de cada familia debe ce—
Asi que, no vemos que fuese vituperado Abrahan en der al interés general de la sociedad entera. Con efc
la Sagrada Escritura por haber tenido trescientos es— to, vemos la autoridad paternal restringida por las
clavos. Sara, su esposa, castiga á, Agár, su criada, leyes de Moisés; un hijo rebelde á sus padres es con
por haberla faltado al respeto, y habiendo huido esta, denado á muerte, no por ellos, sino por los jueces,
un angel del Señor la manda volverá la casa de sus y el pueblo es el que se enearga de ejecutar la sen
amos y besar la mano á su señora. Gén., c. 16, y.5. tencia. Deut., c. 21, y . 18: política mucho mas sá
Un prisionero de guerra, condenado á muerte, se bia que la de los griegos y romanos, quienes atri
tiene por dichoso con librarse de este castigo, hacién buian al padre la facultad de disponer de la vida de
dose esclavo, y debe la vida á aquel que le toma un hijo recien nacido, de esponerlo hasta tres veces
para su servicio; un particular, sin recurso alguno, despues de haberle criado. La ley cristiana ha hecho
espuesto á perecer de hanbre, halla un señor que se reformar este desorden; ha estrechado y santificado
obliga á sustentarle, tanto á él como á sus hijos, bajo las obligaciones de los esposos, y han aprendido de
la condicion de servirle perpetuamente; un gefe de ella á y amar mas á un hijo, consagrado á
familia encuentra un niño espósito y abandonado, y Dios por el bautismo.
le cria y conserva, en la persuasion de que este niño En este estado de cosas fue cuando ciertos filósofos
le pertenecerá. ¿En qué caso de estos se ve injusticia insensatos vinieron á atacar los fundamentos de la
alguna? Aun cuando mediase algun contrato en los autoridad paternal, tan antiguos como el ¿
dos primeros casos, nada de esto acontece en el ter— conmover de un solo golpe toda especie de autoridad,
cero; la misma ley natural, que manda á un gefe de sosteniendo que la naturaleza no ha concedido auto
familia salvar á un niño de la muerte, siempre que ridad alguna, que todas se establecieron en virtud
le sea posible, manda igualmente á este último hon de un pretendido contrato, el cual jamás ecsistió,
rar y servir á su libertador, como si hubiera nacido y en virtud del reconocimiento de algunos benefi
de su sangre. Aqui no es necesario ningun, contrato cios recibidos, ó con la esperanza de los que se re
ni convencion de una ni de otra parte: Dios lo ha cibirán.
suplido con anticipacion por la ley eterna de la jus Tambien constituyen á los inferiores por jueces y
ticia y de la humanidad; y sin esta ley suprema nin árbitros de la autoridad á que les manda Dios que se
gun contrato podria tener fuerza de ley, ni imponer sometan; bien pronto quizá resolverán que un hijo,
ninguna obligacion moral. ... - desde el momento en que haya llegado á la pubertad,
En vano es que busquemos en la naturaleza huma es de derecho, y por naturaleza, superior á su padre.
ma el título de esta libertad pretendida que se sostiene Esta moral abominable solo sirve para hacer presen
ser un don del cielo, don fatal, que espondria la es te la diminucion de la autoridad paternal y la nece
pecie humana á una pérdida inevitable. Las necesi sidad de afirmarla, si fuera posible. Se concebirá me
dades á que la naturaleza sujeta al hombre desde su jor aun leyendo el siguiente artículo.
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Autoridad civil y política. En virtud de yes humanas á la sola fuerza coactiva; pero esta fuer
aumentos sucesivos, una familia ha llegado á ser una za no impone mas una obligacion moral, que la im
poblacion, y la reunion de muchas ha formado una pondria la violencia de un ladron armado.
nacion. Ya fuese que las poblaciones se reunieran á Asi la Sagrada Escritura, mas sábia que la filosofía,
causa de la procsimidad, por un comercio mútuo, nos dice que Dios ha dado un gee á cada nacion, in
por alianzas, ó bien por la necesidad de defenderse unam quam que gentem possuit rectorem, Eccl. c. 17,
contra agresores injustos, es preciso convenir en que . 14. Cuando Dios eligió para sí un pueblo particu—
esta nueva sociedad tenia aun mayor necesidad de la ar, se dignó ser su legislador: este cargo era dema—
subordinacion para poder subsistir que una sociedad siado augusto para confiarlo á un hombre; pero dió á
doméstica. La costumbre de obedecerá un padre dis Moisés autoridad para hacer observar las leyes, y
ponia desde luego á los miembros á reconocer la au rescribió el establecimiento de jueces para aplicar
ioridad de un gefe; asi el gobierno monárquico pa as; fulminó la pena de muerte contra el que resistiese
rece ser el mas antiguo. Mas ya fuese que se estable á sus preceptos; y al mandar á los israelitas que se
ciera uno ó muchos gefes, el origen de la autoridad eligiesen un rey , les prohibió oprimir á su pueblo.
es el mismo; Dios habia previsto y preparado su ne Deut. c. 17, y.9 y 20. De esta manera los principios
cesidad, y ha salido garante á todo; cualquiera otro y los hechos demuestran la verdad de la máxima que
legislador no hubiera podido tener la antoridad ne— todo poder viene de Dios. -

cesaria para obligará los particulares, si sus leyes * Pero nuestros adversarios, tan diestros comenla
no hubieran sido autorizadas por el legislador supre dores de la Sagrada Escritura, como profundos razo
mo. Aun cuando todos los miembros, sin escepcion, nadores, acusan de traducirla mal. S. Pablo dice,
hubieran accedido á adoptar estas leyes, seria lo su Rom. c. 13, y 1..": «Todos están sujetos á las po
ficiente quizás para hacer reinar la fuerza, mas no testades superiores, porque toda autoridad emana de
para obligar á la conciencia: tan imposible le es á un Dios, y las que eristen han sido ordenadas ó dirigidos
hombre imponerse á sí mismo una obligacion moral, por él; asi el que resiste á la autoridad resiste á la
cuanto que es incapaz de dará otro hombre la auto orden de Dios.» Estais equivocados, responden los
ridad y el derecho de imponérsela. Aun cuando hu filósofos; allí se dice: las que son de Dios están orde
biera prometido cien veces obedecer, ¿quién le obli nadas ó bien arregladas; luego las que están mal cons
garia á cumplir su palabra, si no hubiese una ley tituidas ó mal organizadas no emanan de Dios. Esta
anterior y eterna que le mandase cumplir su prome es la interpretacion mas literal y conforme á la ra
sa? Aun cuando lo rehusase, ¿qué resultaria de aqui? zon; por qué se puede negar la existencia de potesta—
Toda la sociedad, de que quiso ser miembro sin ob— des injustas, de autoridades usurpadas, establecidas
servar sus leyes, tendria en tal caso derecho para contra la orden y la voluntad de Dios? Será obliga—
tratarle como á un enemigo, y arrojarle fuera de su torio obedecer absolutamente á los perseguidores de la
seno ó castigarle. verdadera religion? Y para cerrarla boca á la imbe
Una vez formada la sociedad civil ó nacional, que cilidad, el poder del Antecristo emanará de Dios? etc.
da esta obligada, por derecho natural, á conservar Sin alterarnos por este insulto, respondemos que
y proteger á toda criatura humana que nace en su este comentario está en oposicion con el testo; supo—
seno; se la considera como su madre, como igual ne que S. Pablo despues de haber establecido que to
mente Dios es su primer padre; á su vez, cada indi do poder viene de Dios, se retracta ólimila este prin
viduo está, desde su nacimiento, sujeto á las leyes de cipio, y declara que el poder no emana de Dios sino
la sociedad, en la cual recibe la vida, pues de otro en cuanto está bien regulado. Pero y quién tiene de—
modo no podria subsistir. Dios, que es quien manda recho para decidir si está bien ó mal regulado? Sin
á la sociedad conservarle y protegerle, porque es hom duda que los particulares antes de obedecer ecsami
bre, le manda, por reciprocidad, que obedezca á las nan si la autoridad es legítima ó usurpada; si las leyes
leyes establecidas y á la autoridad que gobierna; sin son justas y arregladas á la voluntad de Dios; si les
esto no habria igualdad ni justicia. Dios, que no con— parecen injustas, estan dispensados de la obediencia,
sultó al cuerpo de la sociedad para imponerle este y tienen el derecho de resistirá la autoridad: Bella
deber, tampoco tiene necesidad del consentimiento moral Tal ha sido la de todos los sediciosos y faná—
de cada particular para sujetarle á esta obligacion. ticos del universo.
El llamará esta reciprocidad de deberes un contrato 1." S. Pablo, pues, no obró bien mandando á los
real ó presunto, un pacto social, es abusar del térmi fieles en general el rendir honores, tributos y respeto
no y confundir todas las nociones; aqui no hay liber á los poderes establecidos entonces; puesto que eran
tad por una ni otra parte; Dios, padre y bienhechor paganos, tiranos, perseguidores, y verdaderos Ante
de la humanidad, todo lo ha arreglado y prescrito de cristos. Claudio y Neron eran emperadores, y nadie
antemano, y hubiera sido un absurdo el ¿ á cada sostener que el poder de estos mónstruos esta—
particular una libertad destructiva de la sociedad. a bien arreglado.
Por consiguiente, Dios es en realidad et autor y 2." S. Pedro dice sin restriccion: «Estad some
fundador de la sociedad civil, como lo es de la com tidos por Dios á toda criatura humana, al rey como
yugal y doméstica; ha destinado al hombre á una y el mas elevado en dignidad, á los ministros que ha
á otra por las necesidades, por las inclinaciones y nombrado para castigar á los malhechores, y prote—
aun por las pasiones que le ha dado y que tiene ne ger á los hombres de bien, pues tal es la voluntad de
cesidad de refrenar; luego es tambien el solo prin Dios.» 1.” Petr., c. 2, y 13.
cipio verdadero de la autoridad civil y legislativa: 3.º Dirigiéndose el Sabio á las potestades injustas
sin la ley divina natural quedarian reducidas las le— les dice: «Escuchad los que gobernais los ¿ y
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veis con complacencia las naciones alrededor vues afligen á la humanidad vienen tambien de éi; á pesar
tro; Dios os ha dado la autoridad, y vuestro poder que de esto no se sigue que no debamos evitarlos
emana del Altísimo; juzgará vuestras acciones y vues cuando podamos. De este modo, segun ellos, toda au
tros mas secretos pensamientos, porque siendo los mi toridad es un azote de la humanidad como la peste, la
nistros de su reino, no habeis guardado las leyes de guerra y el hambre. Pero ¿se ha demostrado que la
la ni gobernado segun su voluntad. Sapientia sociedad humanapueda pasarse tan facilmente sin una
c. 6, y. 3, autoridad cualquiera que la gobierne, como sin las
y Los primeros cristianos, aunque perseguidos calamidades de que hablamos? Que nos presenten esos
por los emperadores, los obedecieron en todo lo que declamadores , insensatos el ejemplo de una sociedad
no correspondia, á la religion; asi lo representaron civil ó doméstica, que haya subsistido y prosperado
nuestros apologistas á los mismos emperadores y ma bajo una anarquia obsoluta. El verdadero azote de
gistrados; Tertuliano, S. Ireneo y los demas Padres la humanidad seria esa libertad quimérica de que
toman las palabras de S. Pablo en el mismo sentido nuestros adversarios tienen llena la cabeza, y que no
que nosotros. cesan de reclamar; con este bello privilegio ninguna
5.º La teoria sobre los fundamentos de la aulori
sociedad podria subsistir, y bien pronto sus miem
dad la han tomado nuestros censores de los protes bros se destruirian unos á otros. Habiendo nacido el
tantes; Jurieu ha sostenido antes que ellos, que no hombre con pasiones impeluosas, necesita leyes que
hay ninguna relacion de señor, de criado, de padre, las repriman; y de nada servirian estas sino hubiera
de hijo, de marido, de muger que no esté apoyada una autoridad con suficiente fuerza para hacerlas
en un pacto mútuo; que la autoridad, fundada en el ejecutar.
derecho de conquista, no es mas que una pura violen , Antes de establecer que los soberanos han recibido
cia. &c. Bossuet lo ha refatado completamente en su de sus súbditos la autoridad de que estan revestidos,
advertencia quinta á los protestantes número 50 y si nuestros profundos políticos hubieran debido ense
guientes. ñarnos cómo los súbditos pueden dar una cosa qne no
6.º Los mas célebres comentadores, aun protes tienen ni jamás han tenido. Se dice que la autoridad
tantes, no se han atrevido á tergiversar el sentido de pertenece por derecho natural al cuerpo de la socie
S. Pablo, como lo hacen nuestros modernos juriscon dad, que no puede despojarse de ella absolutamente
sultos. Véase la Synopsis de los críticos sobre este y para siempre, que es dueña de recobrarla cuando
pasage. -
su gefe ógeles abusan de ella. La falsedad de este
Hay autoridades ilegítimas, poderes usurpados, go principio está suficientemente demostrada; pero es
biernos tiránicos, contrarios á la voluntad y á la ley necesario acabar de probar lo contrario por el gene
de Dios, convenimos en ello; pero en fin, una vez que ral estado del género humano á fin de que no quede
ecsisten y son reconocidos, está en el interés general duda alguno en materia tan importante.
en el bien comun, respetarlos y obedecerlos, porque En la sociedades mas democráticas, la autoridad
anarquia es el mayor de todos los males, ¿De qué nunca reside en el mayor número, sino en los gefes
peligros no estaria rodeada la sociedad, sifuese lícito de familia y en los ciudadanos principales; ninguna
al primer insensato que creyera la autoridad injusta articipacion tienen en ella las mugeres, los jovenes,
ó ilegítima tocar la trompeta y levantar el estandarte os criados, los estrangeros residentes; y sin embar—
de la sedicion contra ella? Entonces los conquistado go componen las tres cuartas parte de la sociedad. Si
res se verian precisados á tener siempre suspendida la es cierto que ningun hombre ha recibido de la natu
espada sobre la cabeza del pueblo conquistado, y á raleza el derecho de mandar á sus semejantes, si la
º con cetro de hierro, para quitarle el po libertad es un don del cielo de que todo hombre tiene
er de sacudir el yugo. Los principios pues de nues el derecho de gozar desde que tiene uso de razon, es
tros adversarios, lejosde favorecer la libertad del pue indudable que aun en la democracia, la cuarta par
gobierna á los restantes ha usurpado la autori
blo, no tienden mas que á suministrará los soberanos te
un motivo ó pretesto para quitársela enteramente; dad; y este gobierno es tan contrario al derecho natu
Se nos pregunta con arrogancia si se debe obede ral, como la aristocracia y el estado monárquico. Pa
cer en todo á los perseguidores de la verdadera reli ra que todos los miembros de la sociedad ¿ igual
gion. Sin duda que no: Jesucristo ha fijado límites mente de la libertad, es necesario que no haya auto
fuera de los cuales la autoridad civil no tiene poder ridad y que la anarquia sea absoluta.
alguno; ha mandado dar al César lo que es del César En este estado de cosas, veamos cómo podria na
y á Dios lo que es de Dios; ahora bien, la religion se cer la autoridad, y cuáles serian sus fundamentos.
debe á Dios, no al César. Dios es quien la ha estable Reúnense lodos los miembros de la sociedad para es
cido, no solo sin el concurso de la autoridad civil, tablecer y elegir un gobierno, todos deben da su vo
sino á pesar de su resistencia: y en este sentido esla to. Que encarguen la autoridad á los geles de familias,
blecen los apóstoles la máxima de que es mejor obe á un senado óá un rey es igual; se trata de saber qué
puede hacer y qué significa el voto que cada uno emite
decer á Dios que á los hombres. Nadie hay en el mun en este momenlO.
do que no pueda abusar de las facultades naturales
que ha recibido de Dios, del mismo modo que de la Si cada uno dice: os doy la parte de autoridad que
autoridad de que es depositario; pero de aqui no se tengo sobre la sociedad, es desatinar, puesto que ningu
deduce nada. - - na tiene realmente porque la anarquia ecsiste todavia.
Algunos incrédulos han llevado su delirio hasta de Si asegura que dá la autoridad que tiene sobre sí, dá
cir, que si toda autoridad viene de Dios, la peste, la un imposible; porque es absurdo que un particular
guerra, la esterilidad y las demas calamidades que tenga autoridad sobre sí mismo y sea su propio supe
TOM0 l. 31
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rior. Si quiere decir: os doy mi libertad natural, come Autoridad religiosa ó ecles lás tiea. En
te un atentado; la libertad concedida por la natura tendemos por esta, la autoridad de los pastores de la
leza es inalienable; asi lo sienten nuestros filósofos. Si Iglesia sobre los fieles. Luego que un cristiano se con
el voto significa que la dá por cierto tiempo, reserván vence de que, desde el principio del mundo Dios ha
dose el derecho de recobrarla cuando le agrade, el don revelado y prescrito á los hombres la religion, es de—
es ilusorio, porque retener y dar no puede ser. Asi cir, el culto que de ellos ecsige, ya no puede poner
pues, el simple particular no puede dar válidamente en duda que el mismo Dios ha depositado en los sa
ni la autoridad que no tiene, ni la libertad que no po cerdotes la autoridad necesaria para enseñar á los fie
see. Si suponemos que dice: os elijo para atender á la les, y para guiarlos por el camino de salvacion.
necesidad que la sociedad, de que soy miembro, tiene de En el estado de la sociedad puramente doméstica,
ser gobernada, esto ya se comprende; pero entonces el jefe de la familia era tambien el ministro del culto
el particular no hace mas que cederá una necesidad divino: los hijos de Adan, de Noé, de Abraham y de
de que el mismo Dios es autor, y su consentimiento Jacob ofrecieron sacrificios; Melquisedech, rey de
no es libre. Si dice os elijo para ejercer en nombre de Salem, fué tambien sacerdote del Allísimo Génesis
Dios la autoridad que tiene sobre todos nosotros, esto c. 1, y. 18. Pero luego que muchas poblaciones reu
se comprende aun mejor, y entonces es Dios y no el nidasformaron una sociedad civil, secreyó conveniente
hombre quien reviste con la autoridad al depositario que el poder temporal y la autoridad espiritual no
elegido por la sociedad. Desafiamos á nuestros adver estuviesen reunidas en una persona. Dios, al dar su ley
sarios á que den otro sentido razonable al voto de un á los hebreos, eligió la tribu de Leví para desempe
elector cualquiera. ñar las funciones del culto divino, confiando la auto
En fin, lo absurdo de sus principios es palpable por ridad civil y política á Moisés y á los jueces. Jesucris
las consecuencias terribles que de ellos se siguen. Su to, que apareció en el mundo cuando las naciones te
poniendo que toda autoridad se concede en conside nian ya formada su legislacion civil, no derogó mas
racion á los beneficios recibidos ó que se esperan, se que lo relativo á la religion: dió á los apóstoles y á sus
deduce que una sociedad que no procure ningun bien sucesores el poder espiritual ó la autoridad necesaria
á sus miembros, pierde el derecho de dirigirlos; y que para hacer creer la doctrina y observar la moralevan
todo asociado no contento con su suerte, tiene el de— gélica: esto es lo que se llama la autoridad de la Igle
recho de destruirse y privar á la sociedad de sus ser— sia; y se comprende fácilmente que en este sentido
vicios. Segun esta moral el disgusto de este asociado la Iglesia es ¿o de pastores, y no la reunion de
lo despoja de la humanidad y le reduce á la pura ani los fieles.
malidad, pues que nada debe á la sociedad humana. Esta autoridad es evidentemente divina, pues que
¿Pero ha ecsistido jamás sociedad alguna que no haya Jesucristo es Dios: es independiente del poder civil,
procurado y no proporcione algun bien á sus indivi porque el Salvador estableció un Evangelio apesar de
duos? Ha velado por su conservacion aun antes de sn las potestades de la tierra; en nada la perturba, pues
nacimiento; son deudores á sus leyes de la educacion ue el poder civil no se estiende á la religion; no la
ue han recibido, de la seguridad que han disfrutado, ¿ al contrario, la robustece con las lecciones de
¿ las costumbres que han adquirido, de los placeres obediencia que dá á los pueblos.
de la adolescencia y las virtudes que tengan; sus vi— Jesucristo dijo á sus apóstoles: «Me ha sido dado
cios son obra suya, y á ellos deben la desgracias que todo poder en el cielo y en la tierra: id pues, predi
atribuyen á la sociedad. Si la autoridad en general cad á todas las naciones, bautizadlas en nombre del
fuese tan malhechora como nuestros ingratos filósofos Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñadlas á
la suponen, no sufriria con tanta paciencia los insul observar todo lo que os he mandado; yo estoy con vos
tos que la dirigen. Nos guardaremos bien de copiar otros hasta la consumacion de los siglos». Matthei
los abominables consejos que algunos han dado a las c. 28, y 18. Desde que los soberanos y los pueblos
sociedades descontentas de sus gefes. abrazaron el cristianismo, se sometieron á esta orden
La mayor parte acusaron á la moral cristiana de Suprema.
favorecer el despotismo de los soberanos, haciendo sa Mas ninguna verdad se halla á cubierto de los ata
grada su autoridad. ¿Ha sido posible que los cristianos ques de la heregía. Para tener derecho de rebelarse
sensatos hayan desconocido una verdad admitida aun contra una autoridad establecida hace diez y seis si
por los paganos?Ilesiodo y Homero dicen, que los reyes glos, los sectarios han dicho, que Jesucristo conce
son los lugartenientes de Júpiter, que los ha coloca— dió la autoridad espiritual á la Iglesia, es decir, á la
do en el trono: los chinos, que los príncipes han reci— reunion de los fieles, y no á los pastores; que estos
bido su co3mision del cielo: ¿ que Ormudz, ó solo la reciben de la Iglesia, que son simples manda
el principio bueno, ha establecido los reyes para go tarios de los fieles, que no tienen autoridad sobre su
bernar los pueblos. rebaño mas que cuando las ovejas tienen á bien con
Una prueba positiva de la benéfica influencia de cedérsela. Pero Jesucristo, encargando la mision á los
la moral cristiana sobre los gobiernos, es, que el po— apóstoles, ¿hablaba con la reunion de los fieles que
der soberano en ninguna parte es mas moderado y todavia no ecsistia? ¿Se dice acaso en la Escritura, que
mas sábiamente ejercido que en las naciones ilustra Jesucristo haya dado á los fieles el encargo de ense
das por la luz del Evangelio; en todas las demas exis ñar y gobernar á sus pastores?, Sin duda del mismo
ten el despotismo y la esclavitud., Constantino, pri modó que en ella se encarga á los hijos manden á sus
mer emperador cristiano, fué tambien el primero que padres, y á los pueblos que dominen á los reyes. .
con sus leyes puso límites al despotismo egercido por Como los sectarios no podian establecer su secta si
sus predecesores. V. Ley, Rey, &c. no por autoridad divina, ha sido necesario recurrir
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á las potestades del siglo: estas son, las que con sus dad de la Sagrada Escritura, es necesario saber con
leyes, han fundado las iglesias luterana, calvinista certeza: 1.º Que tal libro es canónico, escrito por un
anglicana: por esto no dejaron de enseñar que Dios autor inspirado, y que verdaderamente es la palabra
ha dado á los reyes y á los magistrados el derecho de Dios; si fuese falso, apócrifo, alterado, lleno de
y poder para arreglar y establecer la doctrina y dis— errores, no tendria ninguna autoridad. 2.º Que se ha
ciplina de la Iglesia; y esto se encuentra á cada pa traducido fielmente, y que la version arroja exacta—
so en la Escritura. Pero luego que el interés ha cam mente el sentido del original. 3.° Que el sentido del
biado, encuentran en ella con igual facilidad, que libro es verdaderamente tal como lo comprendemos,
los soberanos no son mas que los mandatarios de sus y que no nos equivocamos en el modo de entenderlo.
súbditos; que su autoridad, cuando abusan de ella, es Sobre cualquiera de estos tres puntos se disputa entre
revocable como la de los pastores. Bien entendido que los creyentes y los incrédulos, entre loscatólicos y los
esta nueva doctrina no se ha preconizado mas que hereges; un simple fiel es á todas luces incapaz de
en los estados republicanos, porque en los demas el entrar en estas disputas, y con muchísima mas razon
soberano no la hubiera consentido. de decidirlas.
A pesar de los anatemas lanzados contra estos er Para estar seguro de la autoridad divina é infalible
rores, algunos de nuestros modernos jurisconsultos de la Iglesia, es necesario convencerse: primero, de la
se han atrevido á renovarlos, siguiendo la misma mision de los apóstoles; segundo, de la legítima suce
marcha que los protestantes: desde luego han soste sion de los pastores que los reemplazan. La mision di
nido que los pastores de la Iglesia no pueden ejercer vina de los apóstoles está atestiguada por las mis
legítimamente ninguna funcion pública de su minis mas pruebas que establecen la divinidad de la reli
lerio, ni ejercer ningun acto de autoridad eclesiástica gion cristiana, y que llamamos motivos de credibili
sin el consentimiento y aprobacion de la potestad ci— dad; estos son los milagros de Jesucristo, los de los
vil: y para completar su sistema, añaden hoy, que los apóstoles, sus virtudes, su martirio, su grande éxi
reyes han recibido toda su autoridad de sus súbditos, to y el mundo cambiado por el cristianismo; prueba
no emanando esta de Dios, del mismo modo que la de demostrativa al alcance de los mas rústicos. La suce
los pastores no proviene de Jesucristo. Asi, los gobier sion de los pastores de la Iglesia por medio de la or
nos no se dejarán ya fácilmente deslumbrar por el denacion, es un hecho público, incontestable, sobre
celo hipócrita que habian afectado en un principio el que nadie duda ni disputa. En el seno de la Iglesia
hácia la pretendida supremacia de su poder. católica, un simple fiel tiene el mismo grado de certe
En el artículo anterior hemos demostrado, que solo za en materias de fé, que el que tiene de sus mas
Dios es el verdadero autor de la potestad civil y polí caros intereses, de su nacimiento, de sus derechos y
lica, cualquiera que sea la persona en que resida. En de sus deberes naturales y civiles; la certeza moral
la palabra PAston Es haremos ver que su autoridad se es llevada al grado mas alto de notoriedad.
deriva de Jesucristo, y que no está sujeta á ningun Una prueba de la necesidad de este método es, que
otro; que la autoridad de la Iglesia es de los pasto se sigue aun en las mismas sectas que hacen profesion
res, y no del cuerpo de los fieles. de no admitirlo. Un luterano, un calvinista, un soci
Es necesario distinguir la autoridad de la Iglesia en niano, antes de leer la Sagrada Escritura por su ca
materias de é, y su autoridad en materias de disci tecismo, estan imbuidos desde la infancia en la doc
lina. La primera es la mision misma que los apósto trina de su comunion. El primero encuentra en la Es
es y sus sucesores han recibido de Jesucristo para critura Santa el luteranismo; el segundo vé en ella el
enseñar á los fieles, mision que á estos les impone la calvinismo, y el tercero descubre allí la doctrina de
obligacion de creer: dijo á los apóstoles: «el que os Socino. No es, pues, el sentido de la Escritura el que
oye, á mí me oye, y el que os desprecia, á mí me des les guia; para ellos su creencia anterior es la que de—
precia.» S. Luc., c. 10, y. 16. En el artículo Misiox cide del sentido de la Escritura. V. EscRITURA SANTA,
probaremos, que la de los apóstoles no concluyó en IGLESIA.
ellos, sino que se ha transmitido á sus sucesores, y Hay otra cuestion, el saber si en materia de disci
durará tanto como la Iglesia. - plina la Iglesia tiene autoridad para hacer leyes, y
Los protestantes, sin ningun respeto á la mision, obligar con penas á que los fieles las observen. V. Le—
dicen, que el simple fiel, para arreglar su conducta, YEs ECLESI ÁSTICAs.
no se deja sujetará la autoridad de la Iglesia, ó á la Como todas las disputas entre la Iglesia católica y
enseñanza de los pastores, sino que por la Sagrada las sectas heterodoxas se reducen á saber cuál es el
Escritura debe examinar lo que Dios ha ó no reve medio mas cierto para conocer la verdadera doctrina
lado, y por consecuencia es verdadero ó falso, cierto de Jesucristo, es bueno observar que nuestro método
ó dudoso; los católicos quieren lo contrario, y consi se funda en un principio único y simple, cuyas conse
cuencias son palpables. Este principio es, que la reli
guientemente estos se sujetan á la via de la autoridad,
y los primeros á la del escámen. Lo primero que es ne gion cristiana es una religion revelada.
cesario ver, cuál de los dos procederes es mas fácil y De esto deducimos nosotros: 1.” luego debemos re
posible para el simple fiel, si asegurarse de la autori cibirla por medio de aquellos á quienes Dios ha en
dad divina de la Sagrada Escritura, ó dar fé á la mi cargado especialmente para enseñárnosla, y no por
sion divina de los pastores de la Iglesia. Desde luegootro conducto. Todo el que no sea enviado por Dios,
decimos, que el primero de estos exámenes no es po que no esté revestido de una mision divina, no tiene
sible á la generalidad de los fieles, y que el segundocarácter ni autoridad para dogmatizar: los talentos,
les es muy fácil. las luces, la santidad y todas las ventajas imagina
Para establecer nuestra creencia solo en la autori bles no pueden substituir á la falta de mision; Je
 A UT 200 AUT

sucristo se la dió á sus apóstoles, estos la han trans— establecer un punto de dogma, por una de las tres
mitido á sus sucesores; y ¿ que esta mision pruebas de que acabamos de hablar, y desecha las
fuese atestiguada por la ordenacion dada en la faz de otras dos, que quiere destruir la tradicion por el silen
la Iglesia; asi se ha perpetuado hasta nosotros el cris cio de la Escritura, en vez de suplir este silencio por
lianismo, y asi se debe conservar hasta el fin de los la tradicion y por la energia de los monumentos, se
Sl 20S. hace sospechoso de fraude. Si por otra parte carece
se sigue de ello: 2.º que siendo un acontecimien— del carácter esencial á la enseñanza, de mision divina
to universal la revelacion del cristianismo, se debe y legítima, es un prevaricador; si resiste al testimo—
probar, como cualquiera otro suceso, por la tradicion nio y á la decision de la Iglesia, es un herege.
oral, por la historia escrita, por los monumentos, Ademas del encadenamiento y evidencia de estas
ó por los ritos esteriores que son relativos á ella. Co consecuencias, tenemos á nuestro favor la práctica
mo que aqui la certeza moral no puede llevarse constante desde los apóstoles hasta nuestros dias.
muy allá, d nuestra fé no puede ser demasiado Cuando se ha suscitado alguna disputa sobre el dog
firme, no se debe escluir ninguna de estas tres prue ma, los pastores se han reunido y han dicho: ved lo
bas; de su perfecto acuerdo resulta el mas alto grado que enseñamos á los fieles, lo hemos encontrado es
de cérteza y publicidad posible. Asi es como se ¿n tablecido y profesado en la Iglesia, cuyo gobierno nos
derá en todas las cuestiones que se susciten sobre un está confiado. Cuando estos testimonios se han en
hecho importante del que pendan nuestros mas caros contrado uniformes, unánimes, ó casi unánimes, han
intereses. dado la decision y fulminado anatema contra los que
3.° Que el hecho general de la revelacion del cris la resistiesen. Si han discutido con los últimos sobre
tianismo se resuelve y descompone en una multitud pasages de la Escritura, ó sobre los argumentos que
de hechos particulares, que deben probarse por las oponian, era para mejor confundirlos. La sola espli
mismas señales que el hecho general. Todas las cues cacion cierta é infalible de la Escritura, es la ense
tiones, en materia de religion, se reducen á saber: ñanza constante y uniforme de la Iglesia.
¿Jesucristo y los apóstoles han enseñado tal doctrina? De esta manera razonó S. Ireneo en el siglo segun
Que la hayan ó no escrito, esto no prueba nada; por do para combatir á los hereges de su tiempo: en el
que en materia de hechos, nos quedan todavia otras tercero, Tertuliano en sus prescripciones contra ellos:
dos pruebas: la tradicion y los monumentos. Aunque en el cuarto, los Padres que disputaron contra los ar
los apóstoles no hubiesen escrito en ninguna parte rianos; y este método jamás ha cambiado.
que el bautismo era necesario para la salvacion, bas De este modo se han visto obligados á obrar los
taria que supiésemos por la historia que quisieron que mismos protestantes, cuando han disputado contra
todos los fieles se bautizaran, y que nunca tuvieron los socinianos en sus sínodos sobre la necesidad del
¿ cristiano á ningun hombre, á no ser que estuviese bautismo de los niños; al silencio de la Escritura ob—
autizado, ó que lo hubiera deseado. Para saber qué jetado por los socinianos, á los mismos pasages en que
efectos se han atribuido al bautismo, no tenemos mas estos se apoyaban, los protestantes han ¿ opo—
necesidad que contemplar las ceremonias con que ner la práctica constante y general de la Iglesia. ¿Qué
este sacramento se ha administrado siempre. respondieron los socinianos? Echais mano, les dije
Deducimos: ...º que la autoridad en materias de fé ron, de los principios católicos que haceis alarde de
se reduce al testimonio. Cuando es constante, unifor despreciar como nosotros. El fundamento de vuestra
me, universal de parte de las diferentes iglesias ó so creencia y de la nuestra es que toda cuestion debe
ciedades cristianas esparcidas en todo el mundo, no ser decidida solamente por la Escritura.
puede ser falso. Cuando los testigos estan adornados Cuando ha sido necesario tomar parte en las dis
de carácter y juran y protestan que no les es permi putas acaecidas entre los arminianos y gomaristas, los
tido ni posible alterar el hecho de que deponen, su ase ministros reunidos en Dordrecht, han resuelto á plu
veracion es mas fuerte y respetable. Tal es el testimo ralidad de votos, que el sentir de los arminianos es
nio de las Iglesias dispersas, anunciado por boca de contrario á la Escritura, y que estos interpretaban
sus pastores. Cuando se disputa si la Iglesia tiene au mal los pasages en que se apoyaban. Pero nosotros
toridad en materia de fé, es como si se preguntase. preguntamos, por qué medio un simple calvinista ha
¿es suficiente la Iglesia para dar testimonio por boca podido convencerse de que los gomaristas han inter
de sus pastores, para atestiguar que ella es la creencia pretado mejor la Escritura que los arminianos.
de las diferentes sociedades que la componen, y este Nos parece mas natural atenernos al testimonio de
testimonio es digno de fé? los obispos cuando dicen: atestiguamos que tal es la
5,º. Resulta de todo que la catolicidad ó la unifor creencia de nuestras iglesias, y este es un hecho pú
midad de doctrina entre estas sociedades disemina blico, sobre el cual les es imposible engañarse ni enga
das es la verdadera regla, á la que grandes y peque ñarnos, que someternos al juicio de los ministros,
ños, sabios é ignorantes deben atenerse, y en la que cuando esclaman: declaramos que tal es el sentido de la
deben confiar. Cuando entre muchas pruebas hay una Escritura: este es un artículo sobre el cual mil doc
que está igualmente al alcance de todos, y que vale tores se han engañado desde el nacimiento del cris
por todas las otras, es natural que todos la invoquen tianismo, y han sido legitimamente condenados.
y descansen sobre ella. Seria seguramente absurdo Fieles imitadores de la marcha de los hereges los
¿ recomendar ó remitir á los fieles á lecturas, á socinianos y los deistas, pretenden que para saber si
iscusiones sobre libros y pasages y á raciocinios que una doctrina ha sido revelada ó no revelada por Dios,
son incapaces de comprender. no es necesario examinar si la han enseñado Jesucris—
Deducimos, en fin, que todo doctor que pretende to, los apóstoles ó alguno de los escritores sagrados,
 AVA 201) AYU
sino si es conforme á la recta razon, ó está en oposi < S". El avaro es enemigo de sí mismo y de la
cion con ella; porque una doctrina contraria á la ra sociedad. Ansioso de poseer, vive fuera de su propio
zon es indudablemente falsa, y no puede haber sido corazon, que es violentamente arrastrado hácia las
revelada por Dios. Es evidente que este razonamiento riquezas, las posesiones y preciosidades. No tiene mo
es aun mas absurdo que el de protestantes; pero mento de quietud, parécele que pierde por instantes
es una consecuencia que se sigue necesariamente; de lo que posee, y que su vida toda depende de nuevas
esta manera la pretendida reforma ha abierto el ca adquisiciones. La avaricia es el cáncer de la sociedad:
mino al deismo. Ya S. Aguslin refutó esta teoría en su detestable objeto es como la personificacion del
su libro de utilitate credendi. despojo, de la injusticia, de la mala fé y de la cruel
1.° La mayor parte de las verdades reveladas son dad. El que está poseido de este pecado capital, jamás
misterios ó verdades incomprensibles al entendi abre las puertas de su corazon á la miseria agena, á
miento humano; examinando atentamente esta doc la compasion, á la condescendencia y al perdon de
trina, no puede conducir mas que á decir: nada com sus créditos: retiene con injusticia lo ageno, exije
prendo. Ahora bien: nuestra ignorancia y falta de in lo propio con crueldad. Semejante estado produce la
teligencia no prueba nada. mas amarga inquietud entre los ansiosos ¿ de
2." El averiguar si Dios ha revelado esta ó la otra adquirir y conservar, y los escesivos temores de per
doctrina, es un hecho; ahora bien, un hecho se prueba der lo poseido. El avaro se vale de la falacia y de
con testimonios y no con argumentos especulativos: fraudes astutos para autorizar sus violentas adquisi
porque una doctrina nos parezca verdadera, no se ciones; es tambien pérfido, y en gran manera perju—
sigue que Dios la haya revelado; y aun cuando nos dicialá la sociedad. En fin, la aparicia es un pecado.
areciese falsa tampoco se seguiria que no era reve detestable, inícuo y característico de una alma venal:
¿ Cuando se trata de saber si una ley emana de A varo nihil est scelestius.... nihil est iniquius quam
la autoridad soberana, no se empieza por examinar amare pecuniam ; hic enim et animam suam venalem
si es justa ó injusta, razonable ó absurda, útil ó habet. (Eccl. X, 9). El avaro tiene su corazon en las
perniciosa; se procura cerciorarse de los hechos que riquezas, es vil adorador de estos ídolos, y pierde,
prueban que ha sido verdaderamente dada y pro por una posesion efímera que se escapa de entre las
mulgada. Es un principio universalmente admitido, manos, la herencia del reino de Dios. Avarus, quod
que es un absurdo arguir contra los hechos. est idolorum servitus, non habet hoereditatem in regno
3.º. La revelacion es igual para los ignorantes que Christi et Dei. (Apost. Eph V, 5).
para los sabios; ahora bien: los ignorantes no son mas Los principales remedios contra la avaricia son: la
capaces de juzgar la falsedad ó verdad de una doctri oracion y meditacion de los bienes eternos, y de la va
na en sí misma, que de decidir la justicia ó injusticia nidad de los de la tierra; la contemplacion de la po.
de una ley cualquiera; pero el hombre mas ignoran breza de Cristo, de su muerte y pasion, la limosna;
te puede fácilmente convencerse de los hechos que las visitas á los necesitados y afligidos; la resignacion
prueban la mision divina de los pastores de la Igle en las pérdidas y quebrantos; y en general cuanto
sia. V. MisioN. dice relacion con la caridad.
.." La via de exámen ha sido en todo tiempo el
orígen de las herejías; tambien es el principio de toda Ave, Maria, ó salutacion angélica, oracion á la
especie de incredulidad, porque un sociniano y un Santísima Vírgen, muy usada en la Iglesia romana.
deistajuzgan que los misterios del cristianismo son fal Se compone de las palabras que el Arcángel S. Ga
sos y absurdos, deciden que Dios no ha podido reve briel dijo á la Vírgen Santísima cuando vino á anun—
larlos, y que toda revelacion es una impostura: imitan ciarle el misterio de la Encarnacion, de las de santa
la obstinacion de los ateos, que sostienen que Dios no Isabel cuando fue visitada por la Vírgen, y por últi
ha criado el mundo porque no está hecho á su gusto. mo de las que usa la Iglesia para implorar su inter
Es necesario no confundir el exámen de la mision cesion. Se llama Ave, Maria, por principiar con es
con el de la doctrina: el primero está al alcance de las palabras que significan: Dios te salve, Maria.
los simples fieles, pero no el segundo. Una vez probada Se llaman tambien Ave, Marias, los granos ó cuen
la mision de los pastores, el deber de un fiel es creer tas mas pequeñas del rosario, que indican cuando
sin examinar la doctrina porque es incapaz de ello. se reza que se debe decir Ave, asi como sobre los mas
gruesos se reza el Pater noster, ó la oracion domini
Avaro, Avariela. A los filósofos moralistas es cal. Véase el antiguo Sacramentario por Grandeolas,
á quienes corresponde hacer sentir la bajeza y las fu— 1.° parte, pág. 14.
nestas consecuencias de esta pasion; los teólogos la
llaman uno de los siete pecados capitales; muchas AVE, MARIA (Religiosas del). V. SANTA CLARA y
veces es censurada en la Sagrada Escritura. Salomon, FRANCIsCAs.
en los proverbios, y los profetas, se han esforzado en
curar de ella á los judios; Jesucristo reprende fre Ayuno. Nada tenemos que decir en cuanto á los
cuentemente este vicio de los fariseos; S. Pablo ins ayunos de los paganos, de los judios y de los maho
pira hácia él el horror el desprecio; dice que es una metanos; pero como esta costumbre se conserva en
idolatría. En efecto, los deseos de nuestro corazon el cristianismo, y los herejes y los epicúreos moder
son una especie de culto que dirigimos á los objetos nos la han combatido, estamos obligados á hacer su
en que hacemos consistir nuestra felicidad. Asi se di apología. Observaremos desde luego, que el ayuno no
ce generalmente que los avaros no tienen mas Dios se habia mandado á los judios por ninguna ley posi
que el dinero. tiva; no es pues una práctica puramente ceremonial;
 AYU 202 AYU
sin embargo, en el antiguo Testamento se aprueba, y enfermo, tampoco Dios es cruel cuando manda á un
se alaba como una mortificacion meritoria y agrada pecador castigarse, humillarse, padecer y ayunar.
ble á Dios. David, Acad, Tobías, Judith, Esther, Da Para saber si el ayuno es perjudicial á la salud, ó
niel, los ninivitas, toda la nacion judia, por este me— nos deja incapaces para desempeñar nuestras obliga
dio han alcanzado de Dios el perdon de sus pecados, ciones, basta ver si hay menos ancianos en la Trapa
6 gracias particulares. Los profetas no han reprobado y en Siete—fuentes, que entre los voluptuosos del si
absolutamente los ayunos de los judios, sino el abuso glo: si á los médicos se les llama mas frecuentemen
que hacian de ellos, y aun mas de una vez les han exhor te para curar las enfermedades adquiridas por el ayu
tado á que ayunasen. Joel c. 1, y.1; c. 2, y, 12, &c. no, que para tratar las dolencias ocasionadas por la
En el nuevo Testamento se citan con elogio los ayu intemperancia, y en fin si los glotones son mas exac
nos de S. Juan Bautista y de la profelisa Ana. El mis tos en llenar sus deberes, que los hombres sóbrios y
mo Jesucristo nos dió el ejemplo de ellos, S. Mateo mortificados. Cuando leemos las disertaciones de los
c., y. 2, ha reprendido solamente á los que ayuna epicúreos modernos, nos parece que no buscan lo que
ban por ostentacion, con el fin de parecer mortifica es útil á la ssciedad en general, y que solo piensan
dos, c. 6, y. 16 y 17, dice que no pueden ser arro— en justificarse de la libertad con que quebrantan las
jados los demonios, sino por la orácion y el ayuno, leyes de la abstinencia y el ayuno. V. CUAREsMA,
c. 17, y. 20. No obligó á sus discípulos, sino que les AbsTINENCIA.
predijo, que aun cuando ya no estuviese con ellos, Consideran como fábulas lo que se lee en la vida
ayunarian, c. 9, y, 15, y en efecto lo ejecutaron, de muchos santos de uno y otro sexo, que han pasa—
ues vemos á los apóstoles prepararse con el ayuno y do treinla ó cuarenta dias sin comer. Estos hechos es
a oracion á las funciones de su ministerio. Act. c. 13,
lan demasiado averiguados para que se pueda dudar
y.2, c. 1, y. 22; c. 27, y. 21. S. Pablo exhorta de ellos. Independientemente de las fuerzas sobrena
á los fieles á que se ejerciten en el ayuno. 2." Cor. turales que Dios puede dar á sus siervos, es cierto
c. 6, y.5; y él mismo la practicaba, c. 11 , y . 27. que hay temperamentos que, fortalecidos por el hábi
Es pues una accion santa y laudable. to, pueden llevar el ayuno mucho mas allá que el co
Los enemigos del cristianismo piensan del ayuno mun de los hombres, sin desarreglar su salud y aun
de muy diverso modo. Dicen, que es una práctica su sin debilitarse mucho. Lo que leemos en las historias
persticiosa fundada en una idea falsa de la divinidad, de muchos viageros que se han visto precisados á pa
por la que se han persuadido que se complacia en sar muchos dias en trabajos escesivos, sin mas ali
vernos padecer. Los orientales y los platónicos soña mento que un puñado de harina de maizó algunas
ban que somos infestados por los demonios que nos frutas silvestres, hace muy creible lo que se refiere
conducen al vicio, y que el ayuno sirve para vencer de los ayunos gua dados por los santos. En general,
los y hacerlos huir. El ayuno puede perjudicar á la la naturaleza necesita poco para sostenerse, pero la
salud, y disminuyendo nuestras fuerzas, nos hace in sensualidad convertida en hábito es una tiranía casi
capaces de desempeñar las obligaciones que requie invencible. Nos admira el rigor y la multitud de los
ren vigor. ayunos que aun practican las diversas sectas de los
Sin embargo, aun hoy dia los mas acreditados na cristianos orientales.
turalistas convienen en que el remedio mas eficaz Daillé, Bingham y otros escritores prolestantes sos
contra la lujuria es la abstinencia y el ayuno. Histo tienen que en los primeros siglos el ayuno no com
ria nat... t. 3, en 12.”, c., p. 105. ¿Creen por esto que prendia la abstinencia de la carne, y que solamente
la lujuria es el demonio malo que tienta nuestra al consistia en diferir la comida hasta la noche, y escluir
ma? Los PP. de la Iglesia que tanto han recomen de ella los manjares delicados todo lo que pudiese
dado el ayuno, y que ellos mismos lo practicaron, alhagar la sensualidad. Lo prueban con un pasage de
tampoco lo creian. Los antiguos filósofos, los secta— Sócrates. Hist. eccles. l. 5, c. 22, que dice: que duran
rios de Pitágoras, de Platon, de Cenon, y aun mu te la cuaresma, unos se abstenian de comer animal
chos epicúreos, han alabado y practicado la absti alguno, olros usaban solamente los pescados, y algu
nencia y el ayuno; para convencerse de esto no hay nos comian sin escrúpulo las aves: por el ejemplo del
mas que leer el Tratado de la abstinencia de Porfirio: obispo Spiridion, que en un dia de ayuno, sirvió to
ciertamente que no habian soñado que la divinidad se cino á un viagero cansado, y le invitó á comerlo. So
complacia en vernos padecer, y los epicúreos no creian zomeno l. 1, c. 11.
en ios demonios, pero sabian por esperiencia que el ¿Pero de todos los manjares con que uno puede ali
ayuno es un medio de debilitar y domar las pasio mentarse los hay mas suculentos ni que alhaguen mas
nes, y que los sufrimientos sirven para ejercitar la la sensualidad que la carne? De esto es lo primero
virtud ó la fuerza del alma. que conviene abstenerse en los dias de ayuno, segun
Todo el que admite un Dios y una providencia la observacion misma de nuestros críticos. El pasage
cree, que cuando el hombre ha pecado le es muy de Sócrates prueba perfeclamente que en su tiempo,
útil afligirse y arrepentirse de ello, porque esto es como ahora, habia cristianos poco escrupulosos que
un preservativo contra la recaida, y los que censuran observaban mal la ley del ayuno; pero los abusos no
el ayuno convienen en que el hombre aligido no hacen regla. Mas de setenta años antes del tiempo en
piensa en comer. No es pues una supersticion el pen que escribia Sócrales, el concilio de Laodicea, cele
sar que el ayuno es una señal y un medio de peniten brado en el año 366 ó 367, habia decidido que se de
cia, como tambien un remºdio contra la fogosidad de bia observar la Xerofagia, ó no vivir mas que de ali
las pasiones. Asi como á un médico no se le acusa de mentos secos durante los cuarenla dias de ayuno;
crueldad porque mande la dieta y los remedios á un can. 50; no permitia pues el uso de la carne.
 AZA 203 AZI

El ejemplo de S. Spiridion favorece todavia menos en toda la Iglesia antes del siglo XI; quiere probarlo
á nuestras adversarios. Observa el historiador, que con S. Epifanio, que habla del pan azimo como de
no se halló en su casa ni pan, ni harina; el viagero á un rito afectado por los ebionitas, Heres. 30, n. 25;
¿ sirvió el tocino rehusó al principio el comerlo, con S. Ambrosio, que llama el pan de la Eucaristía
hizo presente que era cristiano, y que su uso no era un pan usual, de Sacram. l. , c. ; con el autor
el de comer de carne en cuaresma. Venció su repug de la vida del papa Melquiades, que murió en el año
nancia el santo obispo, diciéndole, que segun la Es— 314, y llama á la Eucaristía fermentum; por el pon
critura Santa, todo es puro para los corazones pu— lífice Inocencio l, que murió en el de 17, y en una
ros; la necesidad le escusaba en aquella ocasion. de sus carlas la llaman tambien asi: por último, Focio,
Esta respuesta nos manifiesta por qué la Iglesia no que empezó el cisma de los griegos en el siglo IX, no
hizo desde luego una ley general de la abstinencia; se objeta á los latinos el uso del pan azimo, cuando Mi—
temia favorecer el error de los marcionitas, que se uel Cerulario, en 1051, les acrimina por esto: luego
abstenian del vino y de la carne porque, segun ellos, ¿ Bigham) no habia aun cuestion sobre esto en
eran producciones del principio malo. De aquiloscáno la Iglesia latina. Oríg. eccles., lib. 15, c. 2, S. 5.
nes de los apóstoles mandaban deponer al eclesiástico Estas pruebas no pueden resistir á los testimonios
positivos de Alcuino, en el año de 790, y de Rabano
que se abstuviese del vino y de la carne por motivo de
horror y no por mortificarse, porque olvidaba que Mauro, en el de 819, que hablan del pan azimo co
estos eran dones del criador, y asi blasfemaba de la mo de un uso mandado y de necesaria observancia.
creacion, Can. 3 y 5, ó segun otros 51 y 53. Luego El primero conocia la práctica de las iglesias de In
que pasó el peligro, la abstinencia se ha observado ¿? , y el segundo la de las de Alemania. Cuan—
generalmente, y es muy poco apropósito que los pro o en el siglo XI se introdujo en España el rito gre
testantes se levanten contra esta disciplina respeta ¿? en lugar del mozárabe, sus iglesias no cam
ble. Véase á Beveridge, sobre los cánones de la Igle iaron en nada el uso del pan de que se servian para
sia primitiva. l. 3, c. 9, S. 7. la Eucaristía; el pan azimo se usaba alli lo menos
Mosheim, aunque protestante, se ha visto obliga desde fines del siglo VI. En el siglo X y XI el papa
do á convenir, que el ayuno del miércoles y del vier— Leon IX sostuvo contra los griegos que se usaba de él
nes parecia haber estado en uso desde el tiempo de en Italia desde tiempo inmemorial.
los apóstoles, ó inmediatamente despues. ¿Han deja Lo que dice S. Epifanio de los ebionitas nos da lu
do introducida los apóstoles una práctica supersticio gar á pensar ¿ se abstenian de consagrar con pan
sa? Un sabio académico ha probado que los ayunos reazimo en la Iglesia griega por temor de aparecer que
ligiosos han estado en uso en la máyor parte de losaprobaban el error de los hereges, que hacian uso
¿ del universo; y remontándose á su origen, de él por apego á los ritos judáicos; pero esta razon
a hallado esta práctica fundada en motivos muy sen no tenia lugar en Occidente, donde nunca estuvieron
satos.Mem. de l'Acad, des Inserip. tom. 5, in-12 pá los ebionitas.
gina 38. Mosheim se ha olvidado del todo del Evan No se ha probado que en tiempo de S. Ambrosio el
gelio, cuando ha dicho y ha repetido que los primeros pan usual fuese el pan fermentado; ahora la gente
cristianos tomaron en la filosofia de Platon su gusto del campo come muchas veces tortas de pan sin le
escesivo por el ayuno y la abstinencia. ¿Los justos del vadura; al contrario, creemos que en la vida del pa—
antiguo Testamento, Jesucristo y los apóstoles habian Melquiades y en la carta de Inocencio I, la pala
estudiado en la escuela de Platon? Dissert. de turbatá ra fermentum está empleada para distinguir el pan
per recent. platónicos Ecclesiá, S 9 y 50; Historia eucarístico del pan ordinario. Del silencio de Focio
ecles. II siglo, 2.° parte, c. 1. S. 12. Historia solamente se debe deducir que este patriarca y los
Christ. sec. 2. S. 35. V. ABSTINENCIA, AscETAs, CUA demas griegos no daban tanla importancia entonces
TESMA, MortifICACION. al pan fermentado como se le ha dado ciento sesenta
años despues, cuando quisieron completar absoluta
Azazel. V. CABRoN EMISARio. mente su cisma, y que en el siglo XI han sido menos
razonables que en el lX. ,
Azimo, del griego ADsy Mos sin levadura, pan sin No se podrá persuadir nunca que en este intérvalo
fermentar. Desde el cisma de los griegos, consumado las iglesias de Italia, de las Galias, de España, de
en el siglo XI por el patriarca Miguel Cerulario, se Inglaterra y de Alemania se unieron de repente para
disputa entre ellos y los latinos si el pan que sirve usar de pan azimo contra su antiguo uso, sin que
para la consagracion del Sacramento de la Eucaris pueda descubrirse ningun motivo ni ningun aconte
lía debe ser azimo ó fermentado; los griegos y demas cimiento que haya podido dar lugar á este cambio;
orientales, los sirios, jacobitas y maronitas, los cof se sabe en el tiempo en que el misal gregoriano sus
tos y los nestorianos se servian del pan fermentado, tituyó al misal galicano y al gótico ó mozárabe, el
y parece que entre ellos este uso se hallaba estableci modo cómo se hizo los motivos que á ello determi
do desde los primeros tiempos del cristianismo; los naron. ¿Seria posible ignorar el origen del pan azimo
latinos consagran con pan azimo, y los sabios no si el uso del pan fermentado hubiera sido un uso cons
convienen en la época en que estableció esta cos tante y universal en todo el Occidente?
tumbre, aunque no ha sido siempre generalmente Es casi cierto que Jesucristo consagró la Eucaris
observada. tía con pan azimo, porque de él solo era permitido
Bingham, gozoso de hallar ocasion de blasfemar usar en la celebracion de la Pascua; esta considera
de la Iglesia romana, pretende que el uso de los pa cion, unida al aviso que S. Pablo da á los fieles,
nes azimos, que llamamos hostias, no se ha conocido 1." Cor. c. 5, y.7. «Purificaos del viejo fermento»,
 AZI 20%) AzO
nos hace concluir que el pan azimo era el mas con mentarios. Los protestantes bubieran debido abste
veniente para la Eucaristía. Los abisinios colos to nerse de imitar la tenacidad de los griegos. La Igle
davia usan del pan azimo para consagrar la Euca sia latina ha sido mas razonable que ellos: cuando
ristía el dia de Jueves Santo: los armenios han afec consintieron en reunirse á ella en el concilio de Floren
tado no poner levadura en el pan eucarístico, ni vino cia, se decidió que cada una de las dos Iglesias tuvie
en el caliz, para manifestar asi su error respecto de se libertad para conservar su antiguo uso. Le Brun,
la unidad de naturaleza en Jesucristo; los ebionitas Esplic. de las cerem., t. 5, pág. 116 y siguientes.
se abstenian de celebrar con pan fermentado, por Thiers hace mencion de muchas supersticiones,
apego á los ritos judáicos; pero la lglesia latina no se practicadas por diferentes seclas, respecto del pan
ha guiado por ninguno de estos molivos. Es muy po— eucarístico. Trat. de las superst., t. 2, lib. 3, c. 1.
co á propósito que los griegos hayan querido cargar—
nos con este ridículo; por desprecio nos llaman los Azote. V. SEPTUAGÉSIMA.
azimitas, y recíprocamente nosotros los llamamos fer

aal ó IBel. los muertos es muy posterior á la adoracion de losas

Divinidad de tros. No empezó hasta que hubo reyes bastante po
los asirios, de derosos para deslumbrar á los hombres con el brillo
los babilonios, del fausto, y pueblos bastante esclavos para llevar la
de los fenicios adulacion hasta los mayores escesos. Véase la diser
ó cananeos, de tacion sobre Moloch, elc. Biblia de Aviñon, tom. 2,
los cartagine p. 855. Mem. de lº Academ. des inscript, t, 71, in
ses, elc. Este nombre significa Se. 12.ºp. 172. Cuando se consideran los desórdenes
ñor; parece sinónimo de Moloch, y, los crímenes de que iba acompañada la antigua
príncipe ó rey: es uno de los nom ídolatría no podemos ¿ de que Dios la
ºbres antiguos del sol: la primera idola prohibiese á los israelitas bajo pena de muerte.
tría ha sido la adoracion de los astros.
V. AsTRos.
Baalitas. Adoradores de Baal. Para disculpar el
Sacrificaban á Baal ó á Moloch, víc— culto tributado al sol, y las demas especies de idola
* timas humanas, hombresó niños; y los trías, algunos incrédulos han querido decir que este
judios imitaron mas de una vez este culto culto se referia al verdadero Dios; que los politeistas
º impío, apesar de la espresa prohibicion de adoraban en los astros y en las diferentes partes de la
Dios. Deut. c. 12.y. 30. Jeremías les acu naturaleza el poder y la hondad del Criador. Esto es
sa de haber quemado sus hijos en holocaus conceder ideas demasiado espirituales á hombres muy
to á Baal, c. 19, y.5, y de haberlos inicia groseros, y cuya estupidez apenas acertamosáconcebir.
do en el culto de Moloch, c. 32, . 35. - Si hubiese una idolatría tolerable, sin duda seria el
Los rabinos, para disminuir el horror de estos sa culto del sol. Este astro se puede decir que es el alma
crificios impíos, sostienen que sus antepasados no que de la naturaleza: nada mas pomposo que los signos
maban sus hijos, sino que los pasaban ligeramente consagrados en su honor por los antiguos poetas. Pero
por el fuego, en honor de Moloch. Las palabras de Je si se preguntase á los peruvianos que lo adoraban, á
remías, cotejadas con la ley del Deuteronomio, pare qué personage tenian intencion de tributar sus obse
ce que atestiguan lo contrario. Si el culto de Baal no quios y sus votos, no puede menos de presumirse que
costaba sienmpre la vida á alguno, sus altares eran fre hubieran nombrado al Criador del universo cuya pro:
cuentemente rociados con la sangre de sus mismos sa videncia gobierna todas las cosas. Creian, que el sol
cerdotes. Esto se prueba por el sacrificio á que los era un ser animado é inteligente: y esta misma era la
desafió Elías para ¿ hicieran bajar fuego del cielo. opiniom de los filósofos griegos; á él pues dirigian los
«Se hirieron, dice el escritor sagrado, segun sus prác homenages que tributaban, porque estaban persua—
ticas, con cuchillos y lancetas, hasta que se vieron didos ¿ veia, oia, y aprobaba todo lo que hacian
cubiertos de sangre.» III. Reg., c. 18, y . 28. para alcanzar sus favores. Cuando quiso Zoroastres
Se ha creido despues que el Dios Bel de los asirios dar una nueva religion á los caldeos que adoraban los
era Nemrod, y el de los fenicios un rey de Tiro; pero astros, no pensó que su culto se refiriese á el solo Dios
no hay ninguna prueba de esto: el culto tributado á criador del mundo.
 BAA 205 BAB
Hay mas: Celso, Juliano y Porfirio acusaron de Pero Moises no supone que por entonces estuviese
crimen á los cristianos, porque no querian dar nin ya habitada la tierra por todas las gentes de que
gun culto á los genios: á esos pretendidos dioses infe— abla en el cap. 10 del Génesis, y enumera con anti
riores ósecundarios, á los que, segun ellos, el Dios su cipacion las generaciones que no vinieron al mundo
premo habia confiado el gobierno del universo. Sos— hasta despues de la dispersion;
tenian como Platon, que este Dios supremo era dema ¿Acaso conocemos bien cuál fue el grueso y la al
siado grande ó se al muy ocupado de su bien tura de la torre de Babel, para asegurar que no ecsis
estar, para mezclarse en las cosas de este mundo; y tian entonces bastantes hombres para hacerla? El de
por consecuencia, que era muy inutil tributarle nin seo que tenian de construir una torre muy alta no
un culto: que el incienso, las oraciones y las ofren prueba que efectivamente la hubiesen elevado á una
as debian dirigirse solamente á los genios ó dioses in grande altura. Por otra parte, no hay una necesidad
feriores. Porfirio, tratado de la abstinencia, l. 2, c. 34,
de sujetarnos á la cronologia del testo hebreo con res
37, 38. Era sin duda el sol alguno de estos dioses, y pecto á la fecha de este acontecimiento: segun los Se.
en este sentido el culto que se le tributaba, podria di tenta y el testo samaritano, no sucedió sino arededor
rigirse al verdadero Dios? de cuatrocientos años despues del diluvio.
Sin entrar en mas discusiones, estamos seguros que Noé y sus hijos conocian las artes, puesto que ellos
si la idolatria hubiese tenido alguna relacion con el construyeron el arca; no se olvidaron de ellas duran
Criador, no hubiera ocasionado entre los paganos tan te el año del diluvio; pudieron pues comunicarlas á
tos absurdos ni tantos crímenes, y Dios no la hubiera sus descendientes, sin que ellos tuvieran necesidad de
castigado con penas tan rigorosas. V. DosEs DE Los inventarlas.
PAGANos, IDoLATRIA. Preguntan los mismos críticos, cómo todas estas
Baanitas. Hereges, sectarios de un tal Baanes, poblaciones podian tener todavia una misma lengua,
mientras que en el capítulo precedente habia dicho
que se titulaba discípulo de Epafrodito, y enseñaba Moises
los errores de los maniqueos por el año 810. Véase que cada uno, tenia la suya; cómo se encon
Pedro de Sicilia, Hist. del Maniqueismo renaciente; traron reunidos en las llanuras de Sennaar, despues
Baronio, ad ann 810. de haber dicho que fueron á habitar el norte y el
mediodia?
Babel. La historia sagrada dice que los hombres ¿Acusaremos de crimen á este historiador por ha
reunidos en las llanuras de Senmaar no conocian mas ber dicho brevemente y con anticipacion en el capí
que un lenguaje: que formaron el proyecto de cons— tulo 10 lo que se proponia esponer con mas porme
truir una torre y elevarla hasta el cielo, antes de se— nores en el capítulo siguiente? Si fuera este un de
pararse, ó mas bien para que les sirviese de señal para fecto, á todos los escritores de la antigüedad se les
no separarse; que Dios, para trastornar este proyecto, podia echar en cara.
en el mismo instante confundió sus lenguas, de modo Cuando los censores de Moises manifiestan su ad
que no se enlendieron ya los unos á los otros; asi se miracion en la construccion de la torre de Babel y en
vieron obligados á separarse é ir á habitar diferentes la confusion de las lenguas, son dos hechos de los
comarcas; y esta torre recibió el nombre de BABEL, cuales los autores profanos no han tenido ningun co
confusion, porque se confundió en ella el lenguage de nocimiento, y manifiestan que los suyos son muy
los homhres. Gén. c. 11. limitados. Eusebio, en su Preparacion evangélica,
Este acontecimiento sucedió el año del mundo 1802. lib. 9, c. 1, 17, etc., ha conservado un fragmento
Faleg, último patriarca de la familia de Sem, acababa de la historia de la Asiria, escrita por Avidéne, don
de nacer; segun algunos comentadores tenia entonces de se refieren estos dos grandes acontecimientos, cu
catorce años, y su nombre significa dispersion. Esta ya tradicion se ha conservado en el mismo punto;
fecha concuerda con las observaciones que Calisthe tambien cita á Artapano y Eupolemo, que dicen lo
nes envió á Aristóteles desde Babilonia; estas eran de mismo. Parece que la guerra de los titanes contra los
1603 años, y este es precisamente el tiempo transcur dioses, de que hablan los poetas, no es mas que la
rido desde la fundación de la torre de Babel hasta la empresa de la torre de Babel, disfrazada por las fá
entrada de Alejandro en Babilonia. bulas.
La Escritura dice tambien que la argamasa de este Por el contrario, Celso y Juliano pretenden que
edificio era de ladrillo mezclado con belun: los viage Moises tomó esta historia de los paganos; pero los es
ros refieren que en este sitio la tierra arroja contínua critos de Moises son mucho mas antiguos que los de
mente una cantidad prodigiosa de belun. Se encuen los poetas. Taciano, Orígenes y S. Cirilo lo han pro
tran á un cuarto de legua del Eufrates hácia el orien bado con todos los monumentos de la historia profana.
te ruinas que se cree ser restos de la torre de Babel; Otros críticos, cuya ambicion , era disminuir el
mas esta opinion carece de fundamento. número de los milagros, han querido hacer que des
Algunos incrédulos han opuesto objeciones á la aparezca el de la confusion de las lenguas en Babel.
historia de la confusion de las lenguas y de la torre de Segun el genio de la lengua hebrea, dicen que esta
Babel. Segun el Génesis, dicen, este irabajo se hizo espresion de Moises, en toda la tierra no habia mas
ciento diez y siete años despues del diluvio; y en tan que una boca y una palabra, puede entenderse que
corto tiempo no pudo nacer suficiente número de hom todos los hombres estaban perfectamente acordes, y
bres para formar todas las poblaciones de que habla no tenian mas que unos mismos sentimientos y unos
Moises, y construir un edificio tan inmenso: no pudo mismos designios; por tanto, las palabras siguientes,
haber bastante tiempo para inventar todas las artes Dios confundió su lenguage, pueden que por
necesarias á la ejecucion de semejante obra. permision de Dios entró en ellos la discordia, y que
TOMO I, 32
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se separaron para ir á habilar diferentes comarcas, y una obra inmoral, antes de separarnos. En vez de
la diferencia de su lenguaje debió naturalmente re humillarse, cuando aun estaba recienle la memoria
sultar de su misma separacion; se necesita muy poco de un castigo tan grande, mas dispuestos á exaltar
tiempo para que dos pueblos que no se comunican no su nombre que el de Dios, provocaron de nuevo su
hablen la misña lengua. Le Clerc, in Génes., c. 11. ira, Dios los castigó, mas no por el diluvio: y á pesar
Dictámen de algunos teólogos de Holanda, carta 19; de la ingratitud de los hombres fue fiel á su promesa.
Simon, Hist. crit. del antig. Testam., lib. 1, c. 1 y La division de , las lenguas los obligó á dispersarse; y
15; Respuesta á los teólogos de Holanda, c. 26; San en castigo de la union que el orgullo habia formado
Gregorio Niseno, Orat. 12, cont. Eunom., es del entre ellos en el común designio de hacerse insignes
mismo parecer. por una obra soberbia, multiplicáronse las lenguas,
Pero esto no está conforme con el sentido natural y desde entonces fueron estrangeros los unos respecto
del testo: Moises dice que Dios confundió su lengua de los otros....
je en el mismo lugar, y lo repite dos veces, c. 11, El siglo XVIII formó en la Enciclopedia un plan
y. 7 y 9, y añade: de tal modo que el uno no entendia enteramente babélico: trató de regenerar al mundo,
la palabra de su vecino. El que una multitud de hom quiso dar nueva religion , otras costumbres, diver
bres no tuvieran antes mas que un solo y único desig sas leyes, diferente constitucion y enseñanzas de las
nio, que empezasen á ejecularlo de comun acuerdo, y que hasta entonces habia venerado, practicado y se
que repentinamente se dividieran sin motivo y sin ra guido. Para tamaña empresa, concibieron sus gefes
zon, y no hayan querido entenderse mas, esto no nos el vasto designio de la Enciclopedia; y muy pronto
arece natural. El historiador mismo previene esta Voltaire, Diderot y D“Alembert, operario principal
idea, atribuyendo á Dios estas palabras: «Si les deja del nuevo edificio, lograron corromper la literatura,
mos obrar, continuarán la obra que han comenzado manchando los conocimientos humanos con todo lina
hasta que la lleven á cabo». No se trata, pues, aqui ge de proscripciones y calumnias. Por lo cual convie
del simple permiso de un suceso natural, sino de una nen los literatos en llamar dicha obra LA BABILoNIA
intervencion positiva de la omnipotencia de Dios. DE LAs CIENCIAs y DE LA RAzoN. Véase á LA—HARPE,
Muchos autores han compuesto disertaciones para Cours de Litterature; á CHATEAUBRIAND, LA-MENNAIs,
saber si la lengua que se hablaba antes de la confu— y los números 93 y 9 del diario, EL Católico. "
sion se conservó sin ninguna alteracion en la familia
de Sem ó en otras, si aquella lengua era la hebrea, Baehiller. V. FACULTAD DE TEOLoGIA.
ú otra, etc. A nosotros no nos pertenecen estas dis
cusiones, puesto que en la actualidad está probado Báculo. Baston pastoral que usan los arzobis
que todas las lenguas se componen de las mismas rai pos, los obispos y los abades regulales, y que llevan
ces monosílabas, y que toda su diferencia consiste en delante cuando ofician.
la union, en la colocacion y en la pronunciacion mas Parece que en el principio era un baston para apo—
ó menos fuerte de los mismos elementos: no puede yarse; pero este apoyo, necesario siempre á los vie
tenerse al hebreo por la primera lengua, mas que á jos, ha sido una señal de distincion. Núm. c. 17, y.2,
otra cualquiera , mientras no se pruebe que se con y c. 21, y. 18. Vemos á los gefes de las tribus de
servan en ella las raices primitivas con mas sencillez Israel distinguirse por el báculo, y este ha sido el ori
que en las demas, lo que todavia no se ha hecho. Un gen del cetro ó baston de mando. Se lee por primera
simple cambio en la pronunciacion de las palabras vez en el concilio de Troyes, del año 867, que los
primitivas ha bastado para que los constructores de obispos de la provincia de Rheims, que se habian
Babel no se entendiesen, y seria necesario un milagro consagrado durante la ausencia del arzobispo Ebbon,
permanente para que los descendientes de Sem con— despues que hubo sido restablecido, recibieron de él
servasen siempre entre sí la misma pronunciacion y el anillo y el báculo pastoral, segun el uso de la Igle
la misma colocacion de las palabras primitivas. Véase sia de Francia. En 885, en el Concilio de Nimes, se
Origen del lenguage y de la Escritura, por M. Gebelin. rompió el báculo de un arzobispo de Narbona (intru
o Sº , Acerca de este famoso edificio, cuyo nom— so) llamado Selva. Balsamon refiere que en Oriente
bre es sinónimo de desorden y de la confusion, puede no le llevaban mas que los patriarcas. El báculo se le
consultarse la nola | 1 al cap. XI sobre el Génesis de entrega al obispo en la ordenancion, para manifestar,
Vindicias de la Biblia, por el abate Du-Clot; en la como dice S. Isidoro de Sevilla, que tiene derecho
cual se demuestra con copia de razones y de erudi de corregir y que debe sostener á los débiles. El au
cion que este gran acontecimiento ha permanecido en tor de la vida ¿ S. Cesáreo de Arlés habla del cléri
la memoria de los hombres, á pesar de lo remoto de go que llevaba su báculo; y S. Burchardo, obispo de
su antigüedad, de la distancia de los lugares, de la Wurzbourgo, es alabado en su vida por lener un
diversidad de las lenguas, y de la dispersion de las báculo de madera. Véase el antiguo Sacramentario,
naciones. El célebre Bossuet ha hecho de este asunto 1." parte, p. 150, 15.
una de sus preciosas elevaciones. «El género humano,
dice, fue asolado, mas no humillado por el diluvio. La Bafometo. Se acusa á los templarios de adorar
torre de Babel fue una obra de orgullo: los hombres, unos ídolos llamados cabezas de Bafometo. Mr. de
á su vez, parecian querer amenazar al cielo, que se Hammer, descubrió doce en el gabinete imperial de
habia vengado por el diluvio, y prepararse un asilo las antigüedades en Viena; se les habia tenido por
contra las inundaciones en la elevacion de este sober ídolos tibetanos. El referido Mr. Hammer descifró,
bio edificio. Entró, pues, en este designio otro senti las inscripciones árabes, griegas ó latinas que conte
miento de orgullo: Hagámonos celebres; decian, por nian, y los símbolos de que estaban cargados. El nom
 BA 207 BA
bre del idolo Meté, que quiere decir en lengua grie— este último la vista, el oido y las demas facultades na
ga, la razon, la sabiduría; se encontraba en todas turales. Segun el principio fundamental de Bayo, una
ellas, acompañado de doctrinas gnósticas y abjura criatura racional y sin mancha no podia tener otro fin
ciones de la fé cristiana. Bafometo se compone de las que la vision intuitiva de su criador; Dios no pudo,
palabras Meté y Baphé que significan bautismo del es sin ser autor del pecado, criar á los ángeles y al pri
píritu; se refiereal baustismo de fuego de los antiguos mer hombre sino en un estado esclusivo de todo cri
nósticos. La Meté se representaba por ídolos con men, ni por consecuencia destinarlo mas que á la bien
orme á las ideas de los gnósticos y principalmente aventuranza; verdaderamente este destino era un don
de las de los ofitas, que bajo una figura humana reu de Dios, pero que no podia negarlo sin faltar á su
nian los atributos ie dos secsos; estaba acompa bondad, á su justicia y santidad. Tal era la doctrina
ñada de la cruz truncada ó de la llave de la vida y del de Bayo en su libro deprima hominis justicia, particu—
Nilo de los antiguos egipcios, que se parece á una T, larmente en el c. 8.” Está contenida en las proposi
de la serpiente tan célebre en todas las Mitologias, ciones, 21, 23,2%, 26, 27, 55,71 y 72, condenadas
de la representacion del baustimo de fuego, y ademas or la Bula de Pio V. 2." Por consecuencia, Dios se
de todos las símbolos masónicos, como el sol, la lu a visto en la indispensable obligacion de conceder
na, la estrella sellada, el tablero, la cadena, y el á los ángeles y al hombre los medios necesarios para
candelero de siete brazos, etc. Como se hallaban estos llegará su fin: de donde se deduce que todas las gra—
ídolos, estos geroglíticos, estos símbolos ó inscripcio cias ya actuales ó habituales que recibieron en el es
nes en los castillos, iglesias y sepulcros de los tem tado de inocencia les eran debidas como consecuen—
larios, de aqui se ha deducido con fundamento, que cia natural de su creacion. 3." El mérito de las vir
os principales gefes é individuos mas instruidos de tudes y de las buenas obras era de la misma especie,
la Orden eran realmente apóstatas entregados en se es decir natural, o lo que es lo mismo, el fruto de la
creto á ceremonias supersticiosas, y probablemente á primera creacion... ..." La eterna felicidad unida á es
rácticas tan licenciosas é impuras como las de los tos méritos era del mismo orden, es ásaber, una pu
ereges, de cuyas ideas participaban, por lo que no ra retribucion, en la que no se contaba para nada con
fué injusta la supresion de la Orden. V. TEMPLARnos. la gratuita libertad de Dios; era una recompensa,
no una gracia.5.º. El hombre inocente estaba esento
Balnema ó Bahim. En el libro 1.º de los Ma— de la ignorancia, de los padecimientos y de la muer
cabeos se refiere que el rey Demetrio escribió al gran te, en virtud de su creacion; la esencion de todos es—
sacerdote Simon en estos términos: Coronam auream tos males era una deuda que Dios pagaba al estado de
et bahem quam misistis, suscepimus. En el griego, en inocencia, un orden establecido por la ley natural,
lugar de Bahem, se lee bainam, que Grocio deriva siempre invariable porque tiene por objeto lo que es
de baís, rama de palmera. Esta interpretacion pare— esencialmente bueno y justo. Esta es la doctrina es
ce la mejor. Era muy frecuente enviar como presente presa de las proposiciones 53, 69, 70 y 75 de Bayo.
coronas y palmas de oro á los reyes vencedores. Ma Véase la historia del Bayanismo por el P. Duchesne,
cab. I., c. 13, y.37 l. 2. pág. 177, 180; y el lib. ... p. 356 y 361; y el
Tratado hist. y dogm. sobre la doctrina de Bayo por
Balamismo ó Bayamismo, errores de Bayo el Abate de la Chambre, tom. 1, c. 2, pág. 49 y si
y sus discípulos. - guientes. -

Miguel Bayo, ó de Bay, nació en Melin el año En cuanto al estado de la naturaleza caida, he
de 1513, territorio de Ath, en Hainaut; habiendo es aquilos errores de Bayo y sus sectarios sobre la na
tudiado en Lovaina y pasado sucesivamente todos los turaleza del pecado original, su transmision y sus con
grados de esta universidad, recibió en ella el de doc secuencias. 1.” El pecado original, segun su sistema
tor en 1550, y al año siguiente fué nombrado por Car no os otra cosa que la concupiscencia habitual domi
los V para desempeñar una cátedra de Sagrada Es nante. 2." Supuesta esta idea, la transmision del pe
critura, con su amigo y compañero de estudios Juan cado de Adan no es un misterio que supere á nues
Hessels. Enseñó v escribió varios errores sobre la tra razon; este pecado se comunica del mismo modo
gracia, el libre aii, el pecado original, la cari que la ceguera, la gota y otras enfermedades físicas,
dad, la muerte de Jesucristo, etc. Estos errores se con que uno nace; esta comunicacion se hace inde
contienen en setenta y seis proposiciones condenadas pendientemente de toda disposicion arbitraria de par
desde luego por el papa Pio V en 1567. - ie de Dios; todo pecado, por su naturaleza, tiene la
Todas las proposiciones de Bayo se pueden referir fuerza de infestar al que lo cometed á toda su poste
á tres puntos principales: unas relativas al estado de ridad como ha sucedido con el pecado original, propo
inocencia; otras al estado de la naturaleza caida ó cor sicion 50. Sin embargo que este se halla en nosotrossin
rompida por el pecado; y las demas al estado de la relacion ninguna con la voluntad de primer Padre,
naturaleza reparada por el Hijo de Dios hecho hombre, proposicion 6. En cuanto á las consecuencias del pe
y muerto en una Cruz. - - cado original, dice Bayo. 1.° Que el libre albedrio sin
1." Como los ángeles y los hombres salieron jus la gracia, no tiene fuerza sino para pecar, proposi
tos é inocentes de las manos de Dios, Bayo y sus dis cion 28.2." Que no puede evitar ningún pecado, pro
cípulos decian que el destino de estas criaturas, á la osicion 29; que todo lo que se deriva de él, aun la
bienaventuranza celestial, y las gracias que cada vez infidelidad negativa, es un pecado, que el esclavo del
mas les conducian á ella, no eran dones gratuitos si pecado obedece siempre á la concupiscencia domi
no dones inseparables de la condicion de los ángeles nante; y hasta que obra por impulsos de la gracia, lo:
y del primer hombre, y que Dios los debia como á das sus acciones emanan de aquella, y son pecados,
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posiciones 34, 36,6%, y 68.3."Que no puede ha No es menos errónea su doctrina en cuanto al mé
per en él ningun amor legítimo en el orden natural, nirito y valor de las buenas obras, puesto que por un
aun de Dios, ningun acto de justicia, ni un uso bue lado se aventuran á decir que en e ¿o de la na—
no del libre albedrio, como suicede á los infieles que turaleza reparada no hay verdaderos méritos que no
todas sus acciones son pecados, como son vicios las sean gratuitamente conferidos á los indignos, y por
virtudes de los filósofos, proposiciones 25 y 26. Asi, se otro pretenden que las buenas obras que justifican á
gºn Bayo, la naturaleza caida y destituida de la gra— los fieles, no pueden satisfacer á la justicia de Dios
cia se halla en una impotencia obsoluta para el bien, por las penas temporales que tienen que purgar des
y siempre determinada al mal que le propone su pues de la remision de los pecados. ni espiarlas, ear
concupiscencia dominante. No le queda ni libertad de condigno. Estas penas segun ellos no pueden rescatar—
contrariedad, ni libertad de contradiccion esenta de
se ni aun por los padecimientos de los santos: propo
necesidad; incapaz de ningun bien no puede produ— sicion 8,57, 84. Véanse los autores citados arriba y el
cir accion que no sea pecado; inclinada á el mal, se Compendio del tratado de la gracia de Tournely por
deja llevar hácia el grado de la propension que la Mr. Montagne.
domina, y no es por esto ni menos criminal, ni me Este sistema, como profundamente lo observa este
nos punible delante de Dios. Véanse los autores arriba último teólogo, es un compuesto estravagante del
cilados. pelagianismo respecto al estado de la naturaleza ino
Los errores de Bayo, de Hessels y sus sectarios no cente: del luteranismo y calvinismo en lo concerniente
son menos chocantes, respecto al estado de la na al estado de naturaleza caida. Con respecto al esta
turaleza reparada por el Redentor; dicen espresamen— do de la naturaleza reparada, las opiniones de Bayo
te que la retribucion de la vida eterna se concede á sobre la justificacion, la eficacia de los sacramentos,
las buenas obras, sin consideracion á los méritos de y el mérito de las buenas obras, se oponen directamen
Jesucristo; y que hablando con propiedad, no es una te á la doctrina del concilio de Trento, y no podian evi
racia de Dios, sino el efecto y la consecuencia de tar las diferentes censuras que han sufrido.
a ley natural, en virtud de la cual el reino celestial En efecto, desde 1552 Ruart Tapper, Josse Raves—
es el premio de la obediencia á la ley; que toda obra tin, Richou, Cunner y otros doctores de Lovaina, se
buena por su naturaleza merece el cielo, asi como la levantaron contra Bayo y Hessels, que esparcian las
mala por su misma naturaleza es digna de la conde primeras semillas de sus opiniones. En 1560 dos guar
nacion, que el mérito de las obras no se deriva de la dianes de los franciscanos de Francia, delataron 18
gracia santificante sino únicamente de la obediencia artículos á la facultad de teologia de Paris, y los con
á la ley, que todas las buenas obras de los catecúme denó por censura del 27 de junio del mismo año. En
nos, que preceden á la remision de sus pecados, como 1567 apareció la bula de Pio V, del 1.º de octubre,
la é y la penitencia, merecen la vida eterna, pro condenando 76 proposiciones censuradas in globo, pe
posiciones 11, 12, 13, 18, 69. ro sin nombrará Bayo. El cardenal de Grandvella,
La justificacion de los adultos, segun Bayo de justif encargado de la ejecucion de este decreto, lo envió á
catione c. 8, y de just. c. 3 y , consiste en la práctica Morillon, su vicario general, el que lo presentó á la
de las buenas obras y en la remision de los pecados. En universidad de Lovaina el 29 de e de 1567.
consecuencia defiende que los Sacramentos del bau La bula al principio fue recibida con respeto, y Bayo
tismo y de la penitencia no remiten la culpa del pe parecia que entonces se somelia á ella; pero despues
cado, sino la pena solamente; que no confieren la gra escribió una larga apologia de su doctrina que dirigió
cia santificante; que puede haber en los catecúmenos al Papa con carta de 18 de enero de 1569. Pio V,
y en los penitentes una caridad perfecta, sin que les despues de un maduro examen, confirmó su primera
sean remitidos los pecados; que la caridad, que es la determinacion el 13 de mayo siguiente, y escribió un
plenitud de la ley, no va siempre unida á la remision breve á Bayo para obligarle á que se sometiera sin
de los pecados; que el catecúmeno vive en la justicia tergiversacion. Bayo dudó algun tiempo, y se sometió
antes de haber alcanzado la remision de sus pecados; al fin entregando á Morillon una revocacion de las
que un hombre en pecado mortal puede tener una ca proposiciones condenadas, Pero despues de la muerte
ridad, aun perfecta, sin dejar de estar sujeto á la eter de Jose Rasvestin acaecida en 1570, Bayo y sus dis
na condenacion, porque la contricion aun perfecta, cípulos se levantaron de nuevo. Para poner fin á estos
nnida á la caridad y al deseo de recibir el sacramen
desórdenes, Gregorio XIII dió una bula el 29 de ene
ro de 1579, en confirmacion de la de Pio V, su prede
to, no remite la deuda de la pena eterna, fuera del
caso de necesidad ó de martirio, sin la recepcion cesor, y escogió para que se aceptase por la univer
actual del Sacramento, proposiciones 31, 5, 55, 67, sidad de Lovaina á Francisco Toledo, jesuila y despues
68, etc. cardenal. Entonces ¿? retractó sus proposiciones de
Como en el sistema de Bayo se está espresamente palabra, y por escrito firmado de su puño con fecha 2.
justificado por la obediencia á la ley, este doctor y de marzo de 1580. En los ocho años siguientes hasta
sus discípulos dicen, que no reconocen otra obedien la muerte de Bayo, se renovaron las disputas y no se
cia á la ley que la que emana del espíritu de caridad: acallaron sino por un cuerpo de doctrina dirigida
proposición 6.; nada de amor legítimo en la criatura por los teólogos de Lovaina y recibida por los de Do
racional, mas que aquella caridad laudable que el nai. Santiago Janson, profesor de Teologia en Lovai
Espíritu santo esparce en el corazon, por la que se na, quiso resuciar las opiniones de Bayo y se lo en
ama á Dios, y que cualquiera otro amor es aquel ape— cargó al famoso Cornelio Jansenio, su discípulo, que
lilo vicioso que nos apega al mundo, y que lo reprue en su obra titulada Augustinus ha renovado los princi
ba S. Juan, proposicion 38. pios y la mayor parte de los errores de Bayo. Véase
 BA 209 BAL
JANsENismo. Despues Quesnel en sus Refleaciones mo— obras de este santo doctor, y cuando no se ha tomado
rales ha copiado literalmente un gran número de pro el trabajo de confrontar los ¿ sistemas; pero un
posiciones condenadas por Pio V y Gregorio XIII. teólogo bien instruido sabe distinguirlos fácilmente.
V. QUEsNELisMo. La apología que ha hecho Bayo de sus proposicio
No se necesita ser gran teólogo para demostrar que nes condenadas, ni es sincera ni sólida; no las justifica
el sistema de Bayo es absurdo en sí mismo. ¿En qué sino abusando de los pasages de S. Pablo y de San
fundamento apoya que Dios debia dará la naturale Agustin, como lo ha hecho Lutero y todavia lo ejecu
za inocente todas las ventajas y privilegios concedidos tan los falsos agustinianos.
á Adan? Sin duda que Dios no pudo criar al hombre
en estado de pecado, esto seria contrario á su santidad Balaam. Profeta llamado por Balac, rey de los
y á su justicia: ¿pero cómo se prueba que Dios debe moabitas, para maldecir á los israelitas. Dios le obligó
dar al hombre libre de pecado tal medida de dones á bendecirlos y que les predijera su futura prospe
espirituales y corporales, y tal grado de felicidad y ridad. Núm. c. 2, . 17. Saldrá, dice, una estrella de
bienestar para el presente y para el porvenir? No se Jacob, y se levantará un cetro en Israel que goberna
puede fundar esta pretension sino en los sofismas de rá á todos los hijos de Seht, de consiguiente á todos
los antiguos filósofos y de los maniqueos , respecto al los hombres; porque despues del diluvio no quedó en
origen del mal. Dios, esencialmente dueño de sus do la tierra mas que la descendencia de Seht. El largum
nes y Todo-poderoso, puede concederlos en la medi ó paráfrasis del onkelos, y la de Jonathan, Maimoni
da que le plazca en mas ó en menos, ó hasta el infini des y otros sabios rabinos, han aplicado esta profecía
to. Este es el principio que con razon estableció San al Mesías. Los comentadores cristianos no se han
Agustin para refutar á los maniqueos. Es tambien ab equivocado en entenderla lo mismo.
surdo el suponer que Dios debe alguna cosa á una Los incrédulos han hecho burlas necias de lo que se
criatura, á la que ni aun le debe la existencia. En dice en los Núm. c. 22, y.18, que Dios hizo hablará
esta hipótesis ridicula seria imposible conciliar la per la burra en que iba montado Ilalaam, y han conside
mision del pecado con la justicia , la sabiduria, la rado esta narracion como una fábula ridícula. Pero no
santidad y la bondad de Dios. Si debia tantos favo vemos por qué fuese mas indigno de Dios el hacer ha
res al hombre inocente, ¿por qué tambien no le debia blar á un animal, que dejar oir una voz en el aire, ó
dar la gracia eficaz para perseverar en la inocencia? servirse de cualquier otro signo para manifestar su
Ya que el principio fundamental de Bayo es evi voluntad á un profeta.
dentemente falso y participa del maniqueismo, no No se puede suponer, sin contradecir el sagrado
son menos falsas todas las consecuencias que de él se testo, que Balaam era un falso profeta, un infiel, un
deducen. idólatra porque habitaba entre los ammonitas; es evi
En este sistema, la redencion del mundo por Jesu dente por la narracion de Moisés que este hombre co
cristo es absolutamente nula. El género humano todo nocia y adoraba al verdadero Dios; no salió para ac
lo habia perdido por el pecado de Adan. Qué le ha cederá la invitacion del rey de los moabitas, sino
dado Jesucristo? ¿De qué lo ha rescatado ó libertado? despues de haber consultado al Señor y haber recibi
Nada sabemos de esto. Las pomposas espresiones con do su permiso espreso. Si el ángel del Señor le dijo,
que la Sagrada Escritura nos alaba el beneficio de c. 22, y.32, «Tu viaje es criminal y contrario á mi
la redencion, las acciones de gracias que dá á Dios la designio», es probablemente porque este profeta pen
Iglesia cristiana, el título de Salvador del mundo, son saba entre sí cómo podria conciliar las órdenes de Dios
palahras faltas de sentido: el dogma fundamental del con las miras del rey de los moabitas, por no carecer
cristianismo no es mas que un sueño de la imagina de una recompensa. El modo como habla S. Pedro de
C01. esto, 2." Petr. c. 2, y 15, parece que no significa
Al menos si este sistema fuese consolador, capaz de otra cosa. Por último, los comentadores no convienen
inspirarnos el amor de Dios y el gusto á las buenas mucho en la idea que se debe tener de este personage.
obras, no nos sorprenderia la tenaeidad con que se Sabios críticos han tomado de esto ocasion para
sostiene; pero ninguno mas á propósito que él para presentar una cuestion, que es el saber si Dios puede
desconsolar y desalentará las almas virtuosas, y ha servirse de personages viciosos, aun de los infieles é
cer mirar á Dios como á un tirano, y nuestra existen idólatras, para anunciar el porvenir. En la Sagrada
cia como una desgracia. Es falsísimo que S. Agustin Escritura se hallan muchos ejemplos que prueban que
sea el autor de este sistema; si lo fuere, como osada - Dios lo ha ejecutado por otros ademas de Balaam. El
mente se pretende, se deduciria únicamente que des— profeta Miqueas, c. 3, y 11, acusa á algunos de sus
de haber raciocinado mal contra los maniqueos, co-hermanos de profetizar por el dinero, y con lodo
la argumentado todavia peor contra los pelagianos, y no dice que fuesen falsos profetas. En el libro de Da
que arrebatado por el calor de la disputa ha caido en niel, c. 3, y. 1.º, vemosque Dios envió un sueño profé
escesos reprensibles; mas nada hay de esto. VéaseSAN tico á Nabucodonosor, príncipe idólatra, aunque cono
AGUSTIN. ció al verdadero Dios. Jesucristo, en S. Mat.c.7. y.23,
No nos sorprende verá un luterano como Mosheim dice que en el dia del juicio reprobará áhombres que
confundir juntamente las opiniones de Lutero, de Ba se gloriasen de haber profetizado y hecho milagros en
yo, de Jansenio, de los agustinianos y de los tomistas, su nombre. S. Juan, c. 11, y.51, nos enseña que Cai
suponer que este es el dictámen de S. Agustin, y pre fás, como pontífice, profetizó que Jesucristo moriria,
tender que nunca se le ha demostrado la diferencia. no solamente por su nacion, sino para reunirá los hijos
Hist. Eccl. del siglo XVI, sect. 3.", 1.° parte, c. 1.º de Dios. Probablemente hizo esta prediccion sin que
S.3.”, esto se puede creer cuando no se han leido las rerlo ni comprender el sentido. Nota de Mosheim sobre
 BAÑ 210) BAR

Cuerdorth c. 5, S.89, al fin. En cuanto á las predic asi de Bagnols., ciudad del Langüedoc, en la diócesis
cionesqueseverificaban entre los paganos V.ORACULo. de Uzés, donde estaban en bastante número. Se les
llamó tambien concordoeses ó conzoceses, palabras cu
Banderas (bendicion de). Esta ceremonia se ve yo verdadero origen no se conoce. Estos bañoleses eran
rifica con mucho esplendor al sonido de los tambores maniqueos, y fueron perseguidores de los albigenses.
y trompetas, y aun de las descargas de las tropas que Desechaban el antiguo Testamento y parte del nuevo.
se hallan sobre las armas. Si la bendicion se verifica Sus principales errores eran el que Dios no cria las al
en una ciudad, se llevan todas á la iglesia principal; mas cuando las une al cuerpo, que no tiene pres
en ella el obispo ó algun eclesiástico de distincion, ciencia, que el mundo es eterno, etc. Se dió todavia en
bendice y consagra las banderas que se han llevado el siglo XIII el mismo nombre á una secta de Cátaros.
legadas, con oraciones y bendiciones, con la señal de V. CÁTARos.
a cruz y la aspersion de la agua bendila; despues se
desplegan y las tropas se las llevan en ceremonia. Véa Baralotes. Nombre de ciertos hereges que apa
se su descripcion en los elementos del arte militar, de recieron en Bolonia, en Italia, y que ponian en comun
Mr. Hericourt. -
sus bienes, hasta sus mugeres y sus hijos. La gran
Algunos incrédulos han querido deducir de aqui facilidad con que se entregaban á los mas vergonzosos
que la Iglesia aprueba la guerra y efusion de sangre. escesos de la disolucion, hizo que se les diese, segun
No hay nada de esto; pero con esta ceremonia recuer Fernando de Córdova, en su tratado de eaciguis Anno—
da la Iglesia á los militares que solo Dios concede las nis, el nom:bre de obedientes.
victorias ó castiga con derrotas á los ejércitos; que es
necesario desterrar de estos todo desorden que pueda Bárbaros. La irrupcion de los pueblos del nor—
atraer su ira; abstenerse de todo acto de crueldad te que, en el siglo V y en los siguientes, se arroja
que no sea absolutamente indispensable para vencer ron sobre el imperio romano, y lo destruyeron en oc
al enemigo, y respetar el derecho de gentes aun en cidente, es una época célebre en la historia, pero fa—
medio de los estragos de la guerra. V. GUERRA. tal á la religion y á las costumbres. Merece la aten
«Los soldados, dice el mariscal de Sajonia, deben cion de un teólogo la investigacion de las causas y
considerar como sagrado no abandonar su bandera, y los efectos de esto, porque muchos incrédulos lo han
no seriandemasiadas cuantas ceremonias se emplearan atribuido injustamente al cristianismo. Esto lo espu—
ara hacerla respetable y preciosa. Si se consigue que so bien Fleuri. Costumbres de los cristianos, n. 56 y
¿ soldados la tengan por tal, se pueden esperar mu— siguientes.
chos y muy buenos resultados; la firmeza y el valor de A principios del siglo V, el imperio romano se ha
las tropas serán sus efectos. Un hombre valiente que llaba debilitado en todos sentidos; ya no tenia disci
toma en su mano una bandera, arrostrará los mayo plina en los ejércitos, ni autoridad en los geles, ni
res peligros». De todo esto son una prueba los roma designios constantes, ni acierto en los negocios, ni
mos; tributaban á las insignias militares un cullo idó vigor en la juventud, ni prudencia en los ancianos,
latra y supersticioso, y cuyo esceso reprendieron ni amor de la patria y del bien público. Cada uno
nuestros antiguos apologistas. «Toda la religion de los
romanos es militar, decia Tertuliano; adoran las in
¿ sus placeres y su interés particular, y no
abia mas que infidelidades y traiciones; los romanos,
l

signias, juran por ellas, y son las primeras entre sus afeminados por el lujo y la ociosidad, solo se defendian
dioses». Adv. gentes, c. 16. El cristianismo, destru— de los bárbaros por medio de otros bárbaros que asa
yendo el culto idólatra tributado á las banderas, no lariaban. Habiendo llenado la medida de sus críme
uiso destruir una veneracion tan util al servicio mi— nes, hizo Dios la justicia ejemplar que habia profeli
litar. El uso de bendecirlases muy antiguo. A fines del zado por medio de S. Juan, Apoc., c. 13 y 18. Ro
siglo IX recomienda el emperador Leon el filósofo á ma fué tomada y saqueada muchas veces; se vengó
los capitanes, que hiciesen bendecir sus banderas por la sangre de los mártires con que se habia embriaga
los sacerdotes uno ó dos dias antes de partirá una es do; el imperio de occidente fué presa de los pueblos
pedicion. Mem. de lº A cad, des Inscrip., t. 63, in 12, del norte y fundaron sobre sus ruinas nuevos reinos.
p. 2 y 10. Hé aquí las verdaderas causas de la caida del impe
Como los romanos esculpian ó pintaban en sus ban rio romano; no fué, por cierto, el establecimiento del
deras las imágenes de sus dioses, y los soldados creian cristianismo, como los paganos decian entonces, y
combatir bajo la proteccion de estas falsas divinida como Maquiavelo, y despues de él otros políticos im
des, dándoles un culto idólatra, los primeros cristia— píos ó ignorantes, se han atrevido á repetir.
nos tuvieron durante algun tiempo repugnancia en Se dirá, sin duda, que el cristianismo, que en
ejercer la profesion de las armas. Temian que pare tonces se estableció en el imperio, debió corregir las
ciese que tomaban parte en este culto supersticioso. A costumbres de los romanos, é impedir que se conta
causa de este peligro, Tertuliano, en su libro de corona minasen con tan grandes vicios; pero esta religion no
militis, estableció que no era lícito á un cristiano ser la toleraron públicamente los emperadores hasta el
soldado. Pero sin duda él mismo conoció el demasiado año 311 ; poco despues la desfiguraron los arrianos,
rigor de esta proposicion, puesto que en su Apologéti y los bárbaros aparecieron el 06; entonces un gran
co, c. 37, asegura que los egércitos estaban lenos de número de romanos luchaba todavia contra las luces
cristianos, y sin embargo no los desaprueba. V. ARMAs. del Evangelio. Parece que Dios hizo venir á los fero
ces habitantes del Norte, para demostrar, que es mas
Bañoleses, ó Bañolienses. Secta de he— fácil convertir á hombres medio salvages, que á los
reges que aparecieron en el siglo VIII, y se llamaron epicúreos.
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Los cristianos no podian vivir en medio de una ge estos se moderaron y civilizaron; pero los primeros
neracion tan corrompida sin participar de sus vicios; se hicieron ignorantes y groseros. Se abandonó el es
y no es de estrañar que los Padres de la Iglesia les tudio de la historia y de la física, se dejó de consul—
reprendiesen algunos muy groseros. S. Agustin de lar la antigüedad sagrada y profana; hiciéronse los
Catechis. rudib: , ns. 5, 7, 17, 28; de Morib. Eccli., pueblos supersticiosos y crédulos; por todas partes se
c. 3, &c. Los destrozos de los bárbaros no dañaron crela ver milagros, pronósticos, señales de la benevo
menos las costumbres de la Iglesia, que la corrupcion lencia ó de la ira de Dios: las leyendas de los santos
de los últimos romanos. El evangelio, que es la sobe no contenian mas que fabulas y puerilidades.
rana razon, condena igualmente todos los vicios; la Por otro lado, la autoridad de los obispos se hacia
cada dia mayor; ademas de la dignidad del sacerdo—
estupidez, la falsedad, la ferocidad y la crueldad son cio
tan incompatibles con la verdadera religion, como el y la santidad de la vida de muchos, eran mas
lujo y la molicie. Las guerras, las hostilidades, el pi ilustrados que los legos; los reyes los admitieron en
llage son tan contrarias á la piedad, como á la jusii sus consejos, y les encargaron el gobierno: la ma—
cia y á la probidad natural. Cuando se buscan los yor parte se condujeron con gran fidelidad, y dis—
medios de conservar la vida y los bienes en una ciu minuyeron, en cuanto estuvo de su parte, la miseria
dad tomada por asallo, ó en un pais entregado al sa de los pueblos. Apenas se cuenta un siglo en que no
queo, de evitar la esclavitud , y de salvar el honor hubiese entre ellos santos y hombres de un mérito
de las mugeres, es muy dificil pensar en lo espiritual, distinguido. Pero su crédito se fué insensiblemente
y se necesilan virtudes muy heróicas para contenerse mezclando con poder y jurisdicion temporal; se hi
en medio de la carniceria y los horrores de una victo cieron señores con los mismos derechos que los legos,
ria brutal. y por consecuencia con las mismas cargas de contri
Possidio, en la vida de S. Agustin, pinta el estado buir con gente de guerra para el servicio del estado,
del Africa asolada por los vándalos. Se veian, dice, y muchas veces de dirigirlos por sí mismos. Esta fué
las iglesias sin pastores, las vírgenes y los sacerdotes una de las principales causas de la relajacion de la
dispersos; unos habian sucumbido á los tormentos, disciplina.
otros habian perecido al filo de la espada, otros ha En el siglo IX Carlomagno trabajó mucho por
bian perdido en un duro cautiverio la integridad del reslablecerla, igualmente que el estudio de las letras;
cuerpo, del espíritu y de la é; y se veian reducidos á pero las guerras civiles, que se siguieron á su muer
servirá enemigos feroces y brutales. -
le, esparcieron por todas partes la ignorancia y el des
No solo no resonaban ya en las iglesias los himnos orden. Para colmo de los males, los normandos, lo
y las alabanzas de Dios, sino que en muchos lugares davia paganos,saquearan y asolaron la Francia por to
estos edificios habian sido destruidos. Ya no se bus dos lados; los húngaros devastaron la Italia; los sar—
caban los sacrificios y los sacramentos, y era muy di racenos infestaron las costas y se apoderaron de la
ficil hallar uno que pudiese administrarlos. Los obis Pulla y la Sicilia; ya hacia un siglo que eran dueños
de la España. La guorancia llegó á al estremo, que
os y los clérigos que habian escapado del hierro de
los señores se desdeñaron de aprenderá leer, y mi
os enemigos, estaban despojados, reducidos á la mi raron el cultivo de las letras como una señal de per—
seria y sin poder dar ningun socorro al pueblo. Sal tenecer al estado llano. Parapelados en sus castillos,
viano ha trazado el mismo cuadro de la desolacion de
las Galias; y no era menor en España y en Iliria. en guerra continua ios unos contra los otros y mu
Es cierto que los francos se hicieron cristianos; los chas veces contra su propio obispo, no asistian á la
godos, los borgoñones, los lombardos, de arrianos lglesia episcopal; se contentaban con las misas de sus
capellanes ó con los oficios de los monasterios vecinos.
se hicieron católicos, pero todavia por largo tiem Los monjes no tenian mision para enseñar, ni autori
po fueron bárbaros, apegados á sus antiguos hábitos;
abrazaron el esterior de la religion cristiana sin to dad pará correjir; los obispos predicaban tan pocas
y eces, que en algunos concilios se les mandó ense
mar su espíritu. Esto es lo que hoy sucede con los sal
vages de la América, cuando se logra convertirlos. elñasen á sus diocesanos, al menos en lengua vulgar,
símbolo y la oracion dominical.
Los mismos príncipes no perdieron mas que una par
le de su ferocidad. En aquella época de tinieblas y desorden los pon
tífices vieron obligados á velar mas de cerca sobre
Clodoveo y sus hijos, al paso que por un lado ma toda laseIglesia; á intervenir en todos los negocios, y
nifiestan mucho respeto y celo por la religion, por
otro cometen injusticias y crueldades. El buen rey á suplir las fallas de los obispos. El poder sin límites
Gontran, que la Iglesia ha colocado en el número de que se arrogaron, y que críticos poco instruidos han
ios santos, entre una infinidad de acciones piadosas, mirado como el efecto de una ambicion desmesurada,
luvo grandes faltas; y Dagoberto, este ilustre funda fue en el fondo efecto de las circunstancias y de la ne
dor de monasterios, fué muy vicioso. No es esto decir cesidad.
que álos obispos de aquel tiempo faltase absolutamen Los sacerdotes y clérigos se veian precisados á de—
te la virtud y el valor apostólico: sino que de dos fenderá mano armada los bienes de la Iglesia con
males inevitables, eligieron el menor; quisieron me que subsistian; muchos obligados por la pobreza se
jor obedecer á príncipes semicristianos, que á paga áveian reducidos á ejercer olicios poco decorosos, ó
pasar de provincia en provincia para encontrar
nos perseguidores de la Iglesia. Una prueba de que
no se fiaban mucho en bárbaros convertidos, es, que donde vivir al lado de algun obispo o señor. ¿Qué
en mas de doscientos años apenas se vé un clérigo que estudios podian hacer, cuál podia ser la regularidad
no sea romano; esto se conoce por sus nombres. de su conducla? Con mucho trabajo se pudieron ape
Asi, por la union de los romanos con los bárbaros, nas conservar los estudios y la piedad en algunas
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iglesias catedrales y en algunos monasterios; pero Europa, sino que sin ella estas desgracias hubieran
los monasterios fueron saqueados, arruinados é in sido mucho mayores; que solo ella ha dado recursos
cendiados por los normandos: los monges los ca para dulcificarlas y medios para repararlas; en otra
nónigos muertos ó dispersados y reducidos á vivir en parte probaremos este hecho importante. V. LETRAs,
medio de los seglares. CIENCIAS, etc.
Se puede facilmente calcular el abandono en que Los protestantes han hecho tambien los mayores
se verian, los pobres en aquellos tiempos de miseria esfuerzos para dar una idea desventajosa de las misio
ública; dónde habian de encontrar limosna, cuando nes que se han hecho en diferentes siglos para con—
ubo hambres tan horribles, que la carne humana vertirá los bárbaros del Norte. Aun cuando fuese cier
sirvió de alimento? El comercio no estaba bastante
to todo lo que dicen, seria necesario todavia alabará
desarrollado para suplir la escasez de un pais con la Dios por los felices resultados que han obtenido; pero
abundancia de otro, ó mas bien el comercio no ecsis— refutaremos sus calumnias. V. MisioNEs, Norte.
tia, y la tierra solo era cultivada por esclavos. Toda Uno de los mas violentos de nuestros incrédulos mo
via quedaban, es cierte, grandes bienes á las iglesias: dernos ha llevado su delirio hasta insinuar que los
ero estos bienes eran una lentacion continua para cristianos perseguidos por los emperadores paganos
¿ señores que estaban siempre con las armas en la invitaron á los bárbaros á lanzarse sobre el imperio
mano. Muchas veces hombres enteramente indignos romano; es curiosa su narracion. «Cuando los bárba
usurparon los obispados, apoderándose de ellos por ros del Norte, dice, se arrojaron sobre las tierras de la
fuerza; muchas veces un señor colocaba en ellos á dominacion romana, los cristianos, perseguidos por
mano armada su hijo de corta edad para gozar en los emperadores paganos, no se descuidaron en im
su nombre de las rentas de la Iglesia. La misma Ro plorar los socorros del enemigo esterior contra el es
ma se vió espuesta á estos desórdenes; los tiranue los tado que los oprimia. Predicaron á estos vencedores
de sus cercanías mandaban en ella despóticamente, una religion nueva que les imponia el deber de des
y disponian á su arbitrio del pontificado. Durante el truir la antigua. Pidieron los escombros de los tem
siglo X, no se vieron mas que intrusiones y es— plos para edificar iglesias. Los salvages concedieron
pulsiones violentas en la primera silla, que hasta en— sin dificultad lo que no les pertenecia: esterminaron y
ionces habia conservado la disciplina en toda su pu pusieron á los pies del cristianismo todos los enemi
reza. En el dia los protestantes y los incrédulos se re gos de éste y los suyos propios; se apoderaron de la
¿? con la mala conducta de estos papas indignos tierra y de los hombres, y se la dieron á la Iglesia;
e sus puestos; acusan á la Iglesia romana porque exigieron tributos, y eximieron de ellos al clero, que
los pontífices del siglo siguiente procuraron poner su preconizaba sus usurpaciones; los señores se hicieron
silla á cubierto de este escándalo y de estas veja sacerdotes, los sacerdotes señores.»
ciones. - Esta narracion es una obra maestra de atolondra
Los Concilios se celebraron muy de tarde en tarde, miento: 1.º Este sabio historiador olvida que las irrup
or la gran dificultad de reunirse en medio de las ciones de los bárbaros sobre las tierras del imperio
¿ generales, que no permitian pasar con comenzaron lo menos 107 años antes de Jesucristo, y
seguridad de una ¿ial á otra; y aun cuado se continuaron sin interrupcion hasta su establecimiento
hubieran celebrado con mas frecuencia, ¿dónde te— en las Galias, el año 106. Se dice que Mario en dos
nian la suficiente autoridad para hacer observar sus años mató trescientos mil, é hizo ciento cuarenta mil
cánones por salteadores siempre armados? Los in prisioneros: que Julio César esterminó por lo menos
novadores se aprovecharon de estos tiempos des— otros tantos. En el reinado de Augusto, Druso los ba
graciados para sembrar errores. Les fué muy facil tió de nuevo; pero hicieron añicos las legiones roma
desacredilar al clero, cuyo estado estaba absolu— nas mandadas por Quintilio Varo. En el de Tiberio,
tamente abatido; desfigurar la doctrina cristiana tambien los venció Germánico; pero no pudo evitar
que apenas conocian ; engañar á los pueblos con sus irrupciones. En el de Vespasiano, Plinio el anti
falsas apariencias de regularidad y piedad. De guo, encontró bastantes materiales para componer en
aqui tuvieron origen las diferentes sectas de ma veinte libros una historia de las guerras de Roma con
niqueos, bajo diversos nombres, despues los val— tra los germanos. Tácito observa que desde el consu
denses y otros fanáticos. Los protestantes han tenido lado de Cecilio Metelo hasta el segundo de Trajano, es
gran cuidado de sacar á plaza los escándalos del decir, en 1 10 años, los romanos no se ocuparon mas
clero, la ignorancia y la miseria de los pueblos, los que en domar estos terribles enemigos; pero que á
males de la Iglesia; pero no se han tomado el tra esar de todas las derrolas de estos bárbaros, siempre
bajo de buscar la primera causa de lodos estos ma ueron agresores; que muchas veces habian rechazado
les; han aparentado disimularla, á fin de hacer caer las legiones, y que nunca se tuvieron por vencidos.
todo el odio sobre los ministros de la religion. Entonces, ó los cristianos no existian, ó todavia eran
Si el cristianismo no fuese obra de Dios, hubiera demasiado débiles para atreverse á buscar el apoyo
sin duda sucumbido bajo tan violentos ataques; pero de los bárbaros.
Jesucristo ha demostrado que jamás olvida sus pro 2." Marco Aurelio, Comodo, su hijo, Maximino,
mesas, que siempre está con su Iglesia y que ninguna Valeriano, Claudio el Godo, Aureliano, Probo, Dio—
revolucion humana es capaz de destruirla. cleciano, Constancio y Juliano alcanzaron grandes
No hemos hecho mas que compendiar los detalles victorias contra ellos; pero algunas veces perdieron
y las reflecsiones de Fleuri; cualquiera que las lea sin ejércitos enteros. ¿Se encuentra en la historia algun
prevencion, se convencerá de que no solo la religion motivo para sospechar que en estas diversas circuns
cristiana no contribuyó en d á las desgracias de tancias los bárbaros fuesen llamados por los cristianos?
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Se hallaban estos en tanto número en el ejército de afueros en que por tantos años habia genido. Los cri
Marco—Aurelio, que se atribuian la victoria sobre los menes de todas clases, la relajacion de las leyes so
quados y marcomanos, y pretendian deberla á un mi ciales, morales y políticas, las usurpaciones y san
lagro. Véase LEGION FULMINANTE. Continuaron sir— grientas luchas personificaban una edad que bien
viendo del mismo modo á los emperadores siguientes, y pudiera llamarse estrema en desgracias, en vez de
nuestros apologistas decian á sus perseguidores que no ser conocida bajo el nombre de media, cronológica
tenian en sus ejércitos mejores soldados que los cris mente considerada. En tal estado, y como envuelta
tianos. Los historiadores que han calculado el núme entre tantos desórdenes y horribles desacatos, perma
ro de hombres que perecieron en el imperio desde el necia de pié, grandemente trabajada, la di
reinado de Augusto, por las guerras contra los bárba vina institucion de la Iglesia; y si bien los delitos y
ros, en las batallas entre los diversos pretendientes al la ignorancia llegaron á ser la espresion de mayor
imperio, por las matanzas de judios; por la peste, por bulto, aun entre los ministros del Señor, ¿ eS
as persecuciones suscitadas contra los cristianos, han confesar que solo una institucion divina pudo sobre
convenido en que al principio del siglo V, la especie ponerse al diluvio de corrupcion que todo lo inunda
humana se habia disminuido en Europa y Asia, lo me ha. Asi es, que en el espació de ciñco siglos, que pue
nos en la mitad. Los bárbaros acampados en las orillas den contarse desde el año 60 al 1085, esto es, des
del Rhin no necesitaron se les advirtiese que enton de S. Gregorio el Grande hasta S. Gregorio VII, atra
ces la conquista del imperio romano era bien facil, y viesa el papado los tiempos mas corrompidos y aza
no se engañaron; ¿hubieran resistido las fuerzas ro— rosos de que hay noticia en los anales cristianos.
manas á ejércitos de doscientos ó trescientos mil La sociedad entera se veia próximamente amena
hombres? zada de disolucion y de muerte, sin que fuese dado
3.º Ya en el año 395 los hunos, pueblo escita ó hallar elementos para recomponer las devaslaciones,
tártaro, se habian arrojado sobre la parte oriental del y reparar los estragos que causaban el vandalismo y
imperio romano, y el año 57 penetraron en Persia; y las correrías. ¿Qué estraño, pues, que el ministerio
¿los llamaron tambien entonces los cristianos? eclesiástico participase de los desórdenes comunes y
.." En esta época Arcadio y Honorio, que reinaban como incrustados en unas generaciones siempre ma
el uno en Oriente y el otro en Occidente, eran cristia leadas por el espíritu de barbárie que todo lo man
nos igualmente que su padre Teodosio: jamás persi chaba y corrompia? Sin embargo, en honor del Pon
guieron al cristianismo ni tampoco sus sucesores; ¿qué tificadó, y para eterna apología de la Iglesia, estaba
motivos pudieron tener los cristianos para llamará los reservado á la Cátedra de S. Pedro el gran aconteci
bárbaros, sobre todo á las Galias, donde ya no habia miento de una reforma saludable, que arrancase á la
aganos? Los godos, los borgoñones, los vándalos, sociedad de las tiendas del vandalismo, para estable
¿ lombardos, que inundaron el imperio, eran cristia cerla en hogares pacíficos y de salvacion.
nos, puesto que eran arrianos; los francos eran paga Semejante empresa no requeria solo un talento su
nos ; si los galos hubieran cometido la imprudencia erior y colosal; tampoco bastaban la prevision, ni
de llamarlos, habrian sido mal recompensados con prudencia para salvar á un mundo que alternati
los destrozos que estos bárbaros hicieron despues. vamente se despedazaba y consumia: era necesaria
Se convirtieron , es cierto, en el reinado de Clodo una idea que partiera de Dios, y que la divina Pro-.
veo, pero ya no era tiempo de pedirle los escombros videncia asistiese incesantemente á los esfuerzos del
de los templos para edificar iglesias, pues ya no ec hombre destinado á cumplir sus eternos designios. Y
sistian templos, y los francos saquearon las iglesias hé aquí la tarea que cupo al talento gigante, al co
antes de convertirse. Clodoveo, ya cristiano, diótierras razon'inalterable y á la piedad acrisolada de S. Gre
á las iglesias, pero no tuvo necesidad de quitarlas á gorio VII. Emprendió la reforma, reprimió, castigó
nadie, porque entonces la mitad de las Galias estaba y cortó considerablemente los abusos y escándalos que
sin cultivar por falta de brazos. No era una mala po— ian lamentables circunstancias habian introducido en
lítica obligar al clero á dar valor á las tierras, procu la Iglesia; y sus grandes intentos de constituir el po
rándose colonos y ecsimiéndolos de tributos. El rey der moderno, alentados por Nicolás I y Silvestre II,
Luis XVI creyó conveniente conceder esencion de tri salvaron de entre sus ruinas al mundo entero. Por
butos por veinte años á los que cultivasen los terrenos mucho que los protestantes y filósofos se esfuercen en
estériles; nadie hay tan insensato que lo vitupere; ridiculizar las virtudes eminentes de un santo, á
pero ¿dónde estan los enemigos del cristianismo que quien solo dan á conocer con el nombre de Hildebran
Clodoveo y los francos esterminaron y pusieron á los do, jamás podrán disputarle la gloria de haber lega
de esta religion, como dicen nuestros incrédulos do á las naciones la civilizacion, y mil otros benefi
lósofos? cios que de sus reformas han reportado. .
Asi es como estos sabios críticos coordinan la histo Apesar, pues, de tanta barbárie y corrupcion, con
ria; arguyen con hechos que han soñado: desconocen taba la Iglesia, en aquellos siglos desgraciados, con
los motivos que determinaron la conducta de los so las admirables virtudes, asombrosos ejemplos y mo
beranos y del clero; reprueban á la ventura los pro— numentos insignes de sus santos y escritores. La pie
cederes que dictaron las circunstancias en que enton dad y las letras, la prudencia, la circunspeccion y
ces se hallaba la Europa. V. BENEFIcto, CLERo, etc. el recojimiento, con todas las virtudes hijas del cris
o S" Nada mas aflictivo que el lamentable cua tianismo, tuvieron sus fieles tipos en aquellas épocas
dro que presenta la sociedad durante la invasion de lamentables. Entre varios otros resplandecian en el
los bárbaros, hasta que el mundo moral pudo resta siglo VI, los santos Fulgencio, Benito, Juan Clímaco,
blecerse de las pérdidas, derrotas, escándalos y des Leandro, Hermenegildo, Máximo, Braulio, Germa
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no, obispo de Paris, y Agustin, apostol de Ingla ros principios en todas las cosas, uno bueno y otro
terra: en el VII, Eloy, Eladio, Eugenio III, Ildefon malo; suponiendo que éste existe por sí mismo, y se
so, Julian, Isidoro, Villebrodo, apóstol de la Holanda, ha producido á sí mismo, y que es el autor de todo lo
y Sofronio, obispo de Jerusalen; en el VIII, Beda, Da ¿ ue sucede en el ¿io El segundo, negar que
masceno y Suilberto, apóstol de Sajonia; en el IX, Eu el Verbo eterno o el hijo de Dios tomó carne humana:
logio, electo arzobispo de Toledo, Ignacio, patriarca segun este hereje, el Verbo solo se revistió de un
de Constantinopla, Metodio, Nicéforo y Teodoro Es cuerpo celestial y aéreo, como los ángeles que se han
ludita; en el X, llamado siglo de Hierro, Odon, Pela aparecido mas de una vez á los hombres; asi la carne
yo, Froilan, Atilano, Wenceslao, duque de Bohemia, del hijo de Dios, no era mas que aparente y no pudo
Eduardo de lnglaterra, Romualdo, etc., etc. sufrir, morir y resucitar mas que en apariencia. Este
Por manera, que aun en los siglos bárbaros no al - era el error comun á la mayor parte de las sectas de
laron papas, obispos y sacerdotes que hacian brillar gnósticos. El tercero, negar la resurreccion de la car
la santidad de la Iglesia en el ministerio que les es— ne, sosteniendo que los bienaventurados tendrán
taba confiado. He querido hacer estas indicaciones cuerpos celestiales semejantes á los de los ángeles y al
para que no espante el cuadro verdaderamente lamen de Jesucristo.
table que traza Bergier sobre el sacerdocio de aquella Apenas se acierta á concebir cómo Beausobre, des
época. Creo tambien que conviene miligarlo, como pues de hacer esla esposicion, puede sostener que
en parte puede hacerse con imparcialidad y justicia, tanto Bardesanes como los demas sectarios que han
desvirtuando ciertos contrastes que en nada favorecen admitido dos principios, no reconocian, sin embargo,
al espíritu de piedad. mas que un solo Dios, bueno, todopoderoso, que tiene
Consúltese la IIistoria de S. Gregorio VII por Voigt, elimperio del universo, sin que ser alguno pueda sus
traducida del aleman por el abate Jager; la Historia traerse de su poder. Ibidem, S. 10. 1." Es un absur
general de la Iglesia por el baron Henrion; y la obra do suponer que un ser increado que existe por sí mis
titulada: Le pouvoir des Papes dans l'age moyen. mo, y por consecuencia ab alterno, es esencialmente
malo y que no es Dios; la nocion mas clara que te
Barbeliotes ó Barboriaanos. Secta de nemos de la divinidad, es de que existe por sí misma
gnósticos que decian que un Eon inmortal habia te— y necesariamente. Luego que Bardesanes sentó que
nido comercio con un espíritu virgen llamado Barbe el mal principio se habia producido á sí mismo, dijo
loth á quien habia concedido sucesivamente la prees un absurdo; que todavia no existe, ¿puede darse
ciencia, la incorruptibilidad y la vida eterna; que la existencia? 2." ¿En qué sentido el Dios bueno es
Barbeloth, un dia que estaba mas alegre que lo ordi todopoderoso y dueño absoluto del universo, si hay
nario, engendró la luz, que perfeccionada por la un un ser malo cuya accion no puede impedir, y que no
cion del espíritu, se llamó Cristo; que Cristo deseó la depende de él, pnesto que no le ha dado el ser?
inteligencia y la obtuvo; que la inteligencia, la razon, 3.° Si es cierto que el espíritu malo está contenido y
la incorruptibilidad y Cristo se unieron; que la inte— conservado por el Dios bueno, si nada sucede sin la
ligencia y la razon engendraron á Autógenes, y es voluntadó sin permitirlo éste, es indudable, ó que el
te á Adamas, el hombre perfecto, y á su muger el Dios bueno deja voluntariamente existir el mal, ó
conocimiento perfecto; que Adamas y su muger en que ignora su existencia, ó que no tiene poder para
gendraron la madera; que el primer ángel engendró impedirlo. 4.° No se trata de saber si se siguen es
el Espíritu Santo, la sabiduria ó Prunic; que Prunic, tas mismas consecuencias del sistema ortodoxo, co
sintiendo el estímulo de esposo, ¿iº á Prolar— mo pretende Beausobre, ó si no resultan de él; sino,
chonte, ó primer ¿ que fue insolente y mente cómo la existencia supuesta de un mal principio pue
cato; que Prolarehonte engendió las criaturas ; que de servir para esplicar el origen del mal, una vez de
conoció casualmente á. Arrogancia, y de esta union mostrado que no lo puede esplicar, y que en esta hi
nacieron los vicios y todas sus ramas. Para realzar mas pótesis Dios es siempre responsable del mal que suce
estas maravillas, lasdivulgaban en hebreo los gnósti de en el mundo, es ridículo sostenerla. 5." No se
cos, y sus ceremonias eran tan abominables como es trata solo de esplicar cuál es el origen del mal mo
travagante su doctrina. V. Theodoret. Haret., fabul. ral, y por qué Dios lo permite; sino de buscar la causa
del mal físico, de los trabajos de las criaturas sensi
Bardesanistas. Secta de herejes que toma bles y de su imperfeccion natural, que en el fondo es
ron su nombre de Bardesanes, sirio que vivió en el principio del mal moral. Ahora bien, la opinion de
el siglo II, y habitaba en Edessa, ¿? de Mesopo— Bardesanes, no satisface á esta dificultad. 6." Aun
tamia. Según S. Epifanio, Bardesanes fue al princi cuando se supusiera en el sistema ortodoxo que Dios
pio católico, y se distinguió tanto por su saber como ha criado á los hombres tales como son, imperfectos,
por su piedad. Al contrario, Eusebio habla de él sujetos al dolor, inclinados al mal moral, y capaces
como de un hombre que siempre estuvo en el error. de cometerlo, nada se seguiria contra la omnipoten
Despues cayó en los errores de Valentin, desechó cia, la sabiduria y la bondad infinita de Dios; lo de
parte de ellos, retuvo otros, y añadió algunos de su mostraremos en el artículo MAL. La hipótesis de Bar
cosecha. desanes y de los demas sectarios antiguos, es, pues,
Beausobre, historiador de Bardesanes y de sus er— inútil y absurda en todos sentidos; pero el furor de
rores, Hist. del manich., t. 2, l. , c.9, ¿ reduce á quererlos disculpar y escusarlos, ha hecho á Beauso
tres principales. El primero el de admitir dos prime bre tan mal lógico como ellos. Le veremos discurrir
. ..(1) Gefe de secta que suponian habia de juzgar á los vivos y del mismo modo en los artículos CERDoNIANos, MAN
á los muertos. QUEos, MARCIoNITAs.
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De nada sirve decir que el Dios bueno creó en un á las misiones. Se asociaron á esta songregacion va—
principio las almas puras y de una naturaleza celes— rias personas sobresalientes: aun no tenia dos años
tial, y que el mal principió las redujo y las arrastró de ecsistencia cuando Clemente VII la confirmó al ins
al pecado; que para castigarlas permitió Dios al mal tante por un breve, en el que les permitia elegir un
principio encerrarlas en tiempos groseros y corrup superior y hacer los tres votos religiosos. El hábito
tibles, que éste habia formado. Siempre se seguirá de de los individuos de esta congregacion es el mismo
aqui, que estas almas por su naturaleza, eran capa que tenian los presbíteros seculares de aquel tiempo,
ces de dejarse seducir y de pecar, por consiguiente y enteramente parecido al de los jesuitas. Viven se
débiles é imperfectas: ¿el Dios bueno no hubiera po— gun las constituciones que les dejó Antonio María
dido formarlas mejores, y preservarlas de la seduc Zacarias. Estas se aumentaron en un capítulo general,
cion? La dificultad sacada de la permision del mal celebrado en 1542, y presidido por el obispo de Lao—
subsiste siempre, y la hipótesis de Bardesanes no dicea, como diputado de la Santa Sede; fueron reto—
salisface á ella en manera alguna, no vemos pues en cadas en otro capítulo celebrado en 1579, y ecsami
qué se funda el título de hombre hábil, que Beauso nadas por S. Carlos Borromeo y el cardenal Juan
bre le prodiga. Se dice que escribió un tratado contra Antonio Serbellini, protectores de la congregacion;
los marcionitas, pero su sistema vale tan poco como por último, fueron aprobadas por el papa Gregorio
el de aquellos, XIII, y desde aquel tiempo no han variado. No po—
El error de los que solo admitian en el hijo de Dios dia menos de aumentarse una congregacion tan útil
una carne fantástica y aparente se conoció ya en tiem á la Iglesia. Asi es que los llamaron á Pisa, á Liorna,
de los apóstoles, pues S. Juan lo refutó. Epíst. 2, á Bolonia, á Nápoles, á Génova y otras varias ciu
7. Lo abrazaron la mayor parte de los hereges del dades de Italia. Se estendieron por la Bohemia; Car—
siglo II; y es una prueba de la realidad y cer los Manuel I los trajo á la Saboya, donde quedaron
teza de los hechos publicados por los apóstoles. Si su varios conventos; emperador Fernando II se los
testimonio no hubiera sido irrecusable, todos eslos pidió á la congregacion de Propaganda, y les dió mu
hereges, filósofos mal convertidos, lo hubieran ala chas casas. Enrique lV los hizo venirá Francia. Al
cado. Como no podian conciliar las humillaciones del principio los empleó en la conversion de los calvinis
hijo de Dios, con la idea que se habian formado de la tas de Bearne. La religion calólica volvió á ponerse
divinidad, habrian negado absolutamente su naci en ejercicio en este pais; y puede decirse en cierto
miento, muerte y resurreccion como lo predicaron modo que se debe á su trabajo el restablecimiento de
los apóstoles, si hubieran podido oponer á este tes la fe en esta provincia. Luis XIII les concedió, por
limonio el de los judios o el de algunos testigos ocu un despacho del año de 1612, el permiso de estable
lares. Pero se limitaron solamente á decir que todo cerse en todas las ciudades de su reino á donde fue
esto no fue mas que en apariencia: que Dios fascinó sen llamados. Enrique de Gondi, obispo de París, les
los ojos de los apóstoles y de los demas espectadores donó en 1631 la iglesia y casa del priorato de San
y los engañó con ilusiones. Ahora bien, confesar la Eloi. Son dueños de muchos colegios y seminarios en
apariencia de los hechos, recusar la certeza del tes diversas ciudades del reino; los tienen en las dióce—
timonio de los sentidos, es hacer justicia á la since sis de París, de Sens, de Tours, de Limoges, de Les
ridad y probidad de los apóstoles. Esto es únicamen car, de Oleron, Dax, Basas y Viviers. Los Papas les
te lo que pedimos. Los incrédulos que hoy se atreven han concedido muchos privilegios y esenciones; pe
á tacharlos de embusteros, á mirar como fábulas sus ro en Francia no gozan ninguno de ellos, ni tienen
narraciones, no pueden recusar el testimonio de los otras esenciones que las que son comunes á las Orde
que ningun interés tenian que los ligase á los apósto nes religiosas en general; y en las diócesis en donde
les, y que no obstante confirman su narración por los hay, se consideran sujetos á la jurisdicion epis
el modo mismo de refutarla. La providendia divina copal. No poseen mas que dos curatos en Francia, y
ha tenido pues sus razones para permitir la multitud el uno es el de Passi, cerca de París Este beneficio
de heregias que se manifestaron en el siglo II. les ha motivado un litigio en 1773 con el señor mar—
qués de Bolainvilliers, señor de aquel pais, como re
SX& Barnabita (Derecho eclesiástico). Es un reli presentante de madama Chahu, señora de Passi y
gioso de la congregacion de clérigos regulares de San fundadora del beneficio. Decíase en el título de fun—
Pablo. Tuvo origen esta congregacion el año 1530 dacion, fechado el y 5 de mayo de 1672, que el su—
en el pontificado de Clemente VII. Fueron tres sus perior de la comunidad de los barnabitas de la casa
fundadores: Antonio María Zacarías, Bartolomé Fer de San Eloi en París presentaria á dicha señora y á
rari, y Santiago Antonio Morigia. El primero fall sus sucesores (los señores de Passi), un religioso que
ral de Cremona, y los otros dos de Milan. Los tres sirviese el curato; y en vista de la presentacion, la
descendian de las familias mas notables de su pais; señora y sus sucesores concederian á los religiosos el
pero aun mas distinguidas por su piedad que por su nombramiento: por consiguiente se trató de nombrar
nacimiento. Se unieron para fundar la congregacion en 1773 nuevo cura en Passi á Dom Nogueres, que
de clérigos regulares de S. Pablo, conocidos, por el habia sido presentado por su superior. El señor de
nombre de bernabitas, por haberle tomado de la igle Boulainvilliers se opuso á la posesion, aunque él se
sia de S. Bernabé de Milan que les concedieron para presentó para obtener su beneplácito, pretendiendo
fundar. Tuvo por objeto el formar la vida de los cris ser dueño de elegir por sí mismo el sugeto. Los bar—
tianos sobre la doctrina de las epístolas de S. Pablo; nabitas de S. Eloi defendieron el hecho y la causa de
darles ministros para confesar, predicar y enseñará sus religiosos: hicieron ver que el nombramiento con
los jóvenes en los colegios y seminarios, y dedicarse cedido al señor de Passi solo era un derecho honori
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fico, y que no podia rehusar el sugeto que le presen pobres. Este fondo, aunientado con algunas donacio
taban. Apoyaron esta asercion en diferentes cláusulas, nes, basta para mantener muchas casas en algunas
sacadas de las aclas concernientes al beneficio, y so diócesis. En las que hay tres, la primera es un semina
bre todo en el acto de posesion, segun el cual siem rio comun para los clérigos jóvenes, donde estudian
re habian sido curas en aquel pueblo los mismos que las humanidades, la filosofía, la teología y el derecho
¿ presentado su superior; por lo cual se senten canónico. Ningun empeño se ecsige á los que estu
ció en favor de los barnabitas el pleito. dian humanidades; los filósofos prometen vivir y
Su modo de gobernarse es bastante conforme al permanecer en el instituto; los teólogos prestan ju—
de casi todas las corporaciones religiosas; tienen un ramento. Pueden sin embargo volver al mundo con
general que reside comunmente en Roma ó en Milan, permiso de sus superiores, con tal que no hayan re
y ejerce su autoridad sobre toda la congregacion. Ca cibido las órdenes sagradas. Los curas y beneficiados
da provincia tiene su superior particular con el título del instituto habitan la segunda casa; la tercera es
de provincial: celebran un capítulo general cada tres el retiro de los inválidos de la congregacion. Ino—
años, una vez en Roma y otra en Milan alternativa cencio XI aprobó sus constituciones en 1680. El
mente. En él se nombran todos los superiores, el ge emperador Leopoldo mandó en el mismo año que,
neral y particulares; pero solo les dura la autoridad en sus dominios hereditarios, fuesen promovidos con
los tres años, si no se la continúan en olro capítulo preferencia á los beneficios vacantes: y el mismo pon
r el mismo número de años; debiendo cesar al ca tífice no encio XI aprobó en 168 los artículos
o de ellos, escepto en los noviciados; en donde pue.- añadidos á su regla para el bien del instituto.
den todavia continuar los superiores por otros tres
años mas. La Orden de los barnabitas no ha dado mo Bartolomé (San) apostol. Los antiguos es—
tivos á censura alguna, porque la dulzura de su go critores eclesiásticos nada nos dicen de cierto sobre
bierno mantiene una union ejemplar entre sus miem la vida y los trabajos de este santo apóstol. Segun la
bros. Los religiosos, únicamente ocupados en cum tradicion comun predicó en las Indias; mas parece
blir con su obligacion, no se han mezclado nunca en que con este nombre se estendia en otro tiempo la
¿ miserables disputas que en estos últimos tiempos Arabia feliz. Nada dejó escrito; el falso evangelio,
afligian á la religion. Su estudio principal es el de las que bajo su nombre forjaron algunos hereges, lo de
claró apócrifo el papa Gelasio.
ciencias para la instruccion de los jóvenes que les es
tan encargados en los colegios; y podemos decir que
cumplen esactamente con esta parte de su institu— BARTOLOME (MATANZA DE SAN). Unos de los
to, logrando un buen écsito y manifestando su ce mas funestos acontecimientos de nuestra historia, cu
lo. Su congregacion ha suministrado á la Iglesia bas yo recuerdo estan muy prontos á renovar los enemi-.
tantes prelados, y ahora recientemente á Dom de la gos de nuestra religion, y que suministra ancho cam
Roque, promovido al obispado de Eumenes. Han te— po á sus declamaciones, es la matanza de los calvi
nido en Italia muchos célebres escritores; y en nues nistas, hecha en Paris el 2 de agosto de 1572, que
tros dias en Francia los PP. Colomne, Mirasson y se ha llamado tambien la jornada de S. Bartolomé
Livoy se han dado á conocer por sus obras llenas de Suponiendo que los católicos cometieron este acto de
sabiduria y erudicion (Estracto del Diccionario de Ju crueldad por el celo religioso, es muy fácil hacer
risprudencia). odioso este celo, y deducir que no hay pasion mas
temible.
Rarsanianos ó Semidualitas hereges que Pero está probado por documentos incontestables:
aparecieron en el siglo VI. Defendian los errores de 1." que la religion no fue el motivo de esta matanza,
los gadianitas, y consistian sus sacrificios en tomar y que los eclesiásticos no tuvieron parte alguna en
con las yemas de los dedos la flor de la harina y lle ella. El proyecto formado por los calvinistas de des
varla á la boca. Véase S. Juan Damasceno, de Haeres. tronar dos reyes, muchas ciudades sustraidas de la
Baronio ad annum 535. obediencia, sitios sostenidos, tropas estranjeras intro
ducidas en el reino, cuatro batallas campales dadas
Bartelemitas, clérigos regulares fundados contra el Soberano, ¿no eran motivos suficientes pa
por Bartolomé Hohzanzer en Salzbourgo, el primero ra irritar á Carlos IX, sin el pretesto de religion, y
de agosto de 1640, y esparcidos en muchas provin hacerle ver en los calvinistas súbditos rebeldes y dig
cias de Alemania, Polonia y Cataluña. Viven en co— nos de muerte? Por mas que quieran escusar su re
mun, , son dirijidos por un presidente general, y por belion con la pretendida rectitud de sus intenciones
presidentes diocesanos; se ocupan en formar ecle— y por la razon del bien público, esta escusa, tan fá
siásticos. Los presidentes están sometidos á los ordi— cil de forjar, ni sirve para justificarlos, ni para dis—
narios y tienen á su orden deanes rurales. Estos gra— culpar la crueldad de los católicos. Ningun eclesiás—
dos de subordinacion y otras prácticas que observan, tico fue consultado, ni entró en el consejo en que se
corresponden con buen éxito al objeto de su institu resolvió la matanza de los calvinistas, hasta se es—
cion. Un cura bartelemita tiene regularmente otro cluyó de él al duque de Guisa. Es falso, diga lo que
que le ayuda, y si las rentas de su curato no bastan quiera el autor de los Ensayos sobre la historia gene
para los dos, está mantenido á costa de los curas mas ral, que esta funesta resolucion haya sido preparada
ricos de la misma congregacion. Todos están obliga y meditada por los cardenales de Biragüa y de Retz;
dos por voto á socorrerse mútuamente con lo supér— estos dos hombres no tenian á la sazon sino muy po
fluo, sin estar privados de la libertad de disponer de ca influencia en los negocios; y no fueron elevados
ello por lestamento ó para favorecer á sus parientes al cardenalato sino mucho tiempo despues. Si Gre
 BAR , 217) BAR
gorio XIII dió solemnemente gracias á Dios por este de los protestantes, que contaba mil en París, no ha
acontecimiento, no fue porque se alegrase de la ma podido fijar en detalle mas que cuatrocientos sesenta
lanza de los calvinistas, sino por la conservacion del y ocho, y setecientos ochenta y seis en todo el reino,
rey, el que escribió á todos los soberanos que los re— en lugar de cinco mil que suponia á bulto.
beldes habian, puesto en peligro su vida y su corona. Si se reflexiona sobre eslo, se verá que no era al
Que el hecho fuese verdadero ó falso, el pontífice po— pueblo bajo calvinista al que se queria mal, sino á
dia creerlo con buena fé, y dar gracias á Dios porque los gefes, á los motores de las revueltas, de las sedi
el rey y la religion católica se hubiesen salvado. Si ciones y de los asesinatos que se habian cometido en
los enemigos estuviesen en nuestras fronteras, si se las diferentes ciudades. Es pues imposible que el nú
los atacase y matase gran número, sin duda que da mero de muertos fuese tan grande, como nuestros
riamos gracias á Dios, no por la efusion de sangre, si modernos declamadores han supuesto.
no por la cesacion del peligro. - Lo que acabamos de decir está sacado de una obra
Por confesion de los mismos protestantes, está pro cuyo autor ha sido falsamente acusado de haber he
bado, que los obispos, los eclesiásticos y los religio cho la apologia del dia de S. Bartolomé, cuando solo
sos, lejos de tomar parte en las ciudades en que el se propuso demostrar que los protestantes y sus co
¿ queria matar á los calvinistas, como habia pistas han disimulado el verdadero motivo de esta
echo en Paris, hicieron grandes esfuerzos por evitar— ejecucion sangrienta, han exagerado su atrocidad, y
lo, y salvaron á muchos en los conventos. Esto suce han envuelto en ella á hombres que ninguna parte
dió aun en la ciudad de Nimes, donde los hugonotes tomaron. Un autor que empieza diciendo: «Aun cuan
habian asesinado dos veces á sangre fria á los católi do se descargase á la jornada de S. Bartolome de las
cos. Muchos de estos fueron envueltos en la matanza tres cuartas partes de los horribles escesos que la
de los calvinistas. El autor de los Anales políticos (tí acompañaron, seria bastante espantosa todavia para
tulo, 3.") n. 18, ha tenido pues razon en sostener que ser detestada por todos los que tengan sentimientos de
el clero no tomó ninguna parte en esta mortandad. humanidad»; y que concluye con los versos del presi
2." La proscripcion de los calvinistas fue dicta dente de Thou: Ercidatilla dies, etc. ¿puede con buena
da por una falsa política. La ambicion del almirante fé ser acusado como apologista de esta mortandad?
de Coligni, sus celos contra los Guisas, su conducta El autor del escrito titulado Espíritu de Jesucristo
sediciosa, fueron la verdadera causa de las agitaciones sobre la tolerancia, para escusar á los calvinistas de
del reino. Era con respecto á los calvinistas mas so— haber tomado las armas, dice, que se vieron obliga
berano, que Carlos IX, con respecto á los católicos. dos á ello, porque sabian que se queria atacar á sus
Los hugonotes se atrevieron á decir al rey; haced la privilegios, y obraban de acuerdo con Catalina de
guerra á los españoles, ó nos veremos forzados á hacé Médicis, para impedir que los Guisas se hiciesen due
rosla á ros; el almirante tuvo la teméridad de ofrecer ños del reino.
al rey diez mil hombres para entrar en los Paises Ba Pero porque á los hugonotes pareciese que se que
jos, pues que los tenia á sus órdenes. Este súbdito ria atacar á los privilegios que habian obtenido por
rebelde mereció bien la sentencia de proscripcion fuerza, ¿es una razon legítima para tomar las armas
pronunciada contra él; pero no era necesario casti contra su soberano? Podia Catalina de Médicis auto
garlo con una mortandad. Los elogios que se han rizarlos? Y el temor de que los Guisas fuesen muy po
prodigado los calvinistas, son demasiado sospechosos derosos era un justo motivo de rebelion? Hé aquí unos
para servirá su justificacion. principios bien singulares de derecho público.
3.” Está tambien probado que la muerte del al— Preiende este autor que la muerte de los calvinis
mirante y sus partidarios, no fue un proyecto preme— las fue un asunto de religion y proscripcion á la vez.
ditado y preparado de antemano, sino el efecto mo— La proscripcion es cierta; él mismo acaba de indicar
mentáneo del resentimiento de Catalina de Médicis, sus motivos; pero ¿dónde están las pruebas de la in
y de su hijo el duque de Anjou, y de la cólera que fluencia de la religion? No da ninguna. No es seguro,
inspiraron á Cárlos IX. La proscripcion solo tenia lu dice, que Biragua y Retz, entrasen en el consejo. Si
gar en Paris y respecto á los gefes del partido hugo— hubieran entrado en él, los hugonotes no se hubieran
note, y no en las demas ciudades del reino; pero una matado, y jamás se lo hubieran perdonado. Tambien
vez encendido el furor popular, se llevó mas allá de lo dice, que la humanidad de muchos católicos en este
¿ el gobierno hubiera querido. En las demas ciu encuentro nada prueba; pero la humanidad de los
ades en que el pueblo hizo lo mismo, á pesar de las obispos, de los sacerdotes, de los frailes prueba en
órdenes del rey, no fue en el mismo dia, sino en ellos un fanatismo religioso?
tiempos muy diferentes, puesto que en Tolosa y en Justifica muy mal la conducta y los planes del al
Burdeos sucedió un mes despues de la matanza de mirante de Coligni, por los elogios que los historia
Paris. Los calvinistas y sus sectarios tuvieron la ma dores le han tributado; estos elogios han salido de
la fé de decir que el rey despachó correos á las de plumas de protestantes, ó de escritores que los han
mas ciudades del reino, para hacer asesinar en ellas copiado con prevencion. Es el colmo del ridículo sos
á los hugonotes, cuando en realidad los mandó para tener que el saqueo de Merindol y de Cabrieres, ocur
implir que esto sucediese. rido veinte y siete años antes, fue el preludio de la
." Tambien es indudable que el número de los matanza de los hugonotes.
que perecieron es mucho menor que el que se supo Asegura tambien que mientras Cárlos IX despa
ne. Si algunos escritores lo han hecho ascenderá chaba correos á las provincias para evitar este desor
cien mil hombres, otros han sostenido que no pasó de den, enviaba emisarios secretos para escitará ello á
diez mil, y aun este es demasiado. El martirologio los católicos: esta es una calumnia.
 BAR 218) BAS
Para probar el gran número de los que fueron muer ha sido visto sobre la tierra y ha conversado con los
tos, no aduce mas que escritos que han sido refutados hombres». Este pensamiento i. ha parecido el mismo
muchas veces. -
que aquel de S. Juan: El Verbo se hizo carne y habitó
No vemos el ¿? que los incrédulos pueden sa entre nosotros. No se concibe en qué sentido pudo el
car de este hecho odioso para calumniará la religion. profeta decir, que en el antiguo Testamento Dios ha
Q-S" Sobre esta memorable jornada es digna de sido visto sobre la tierra. Cuando hablaba á los pa—
leerse la Disertacion del abate Caveirac, en la cual triarcas, á Moisés, á los profetas, no lo hacia de un
se demuestran juiciosa y profundamente cuatro pun modo visible. Véase el prefacio sobre Baruch, Biblia
tos que aclaran toda la cuestion de un modo noto de Avignon, t. 10, p. 21.
rio. 1.° Que la religion no tuvo parte en este suceso;
2.º fue un negocio de proscripcion; 3." que ja Barulos, hereges, de que habla Sandero, que
más ha debido considerarse sino relativamente á París; sostenian que el Hijo de Dios habia tomado un cuerpo
.." que pereció mucho menor número del que se dice. fantástico; que las almas habian sido creadas antes de
Hállase esta disertacion al fin del tomo VIII de l” His la existencia del mundo, y habian pecado todas á la
toire generale de lº Eglise, par M. Henrion, edition de vez. Estos dos errores fueron comunes á la mayor
Paris de 1813. parte de las sectas que nacieron en el siglo II de la
Iglesia. Los filósofos que conocieron el cristianismo
Baruch, profeta, hijo de Nérió Nérias, y se no pudieron resolverse á creer ni la caida del género
humano por el pecado de Adan, ni las humillaciones
cretario del profeta Jeremias. Sus profecias estan con
tenidas en seis capítulos; no han llegado á nosotros á que el Hijo de Dios se sometió por repararla. Véase
en hebreo, pero no se puede dudar que escribió en BARDESANISTAs, BASILIDEs.
esta lengua; los frecuentes hebraismos que se encuen
tran en ellas lo manifiestan bastante. Tenemos dos Basilea. (concilio de). Está admitido en Francia
versiones siriacas, pero el testo griego parece mas como ecuménico, al menos hasta la sesion 26. Fué
antiguo. convocado el año 1431, y duró hasta 153; pero la
El historiador Josefo observa, Antiq., l. 10, c. 11, disension entre el concilio y el papa Eugenio IV em
¿ este profeta era de sangre ilustre, y muy versa pezó el año 1437 en la sesion 26 y duró hasta el fin.
o en la lengua de su pais. En el libro segundo de los Fue convocado en virtud del decreto del concilio ge
Macabeos, c. 2, y. 1 y sig... los judios de Jerusalen neral de Constanza, que mandó que cada cinco años
escriben á los de Egipto, que Jeremías recomendó se celebrase un concilio general. Sesion 39.
espresamente á los iban de la Judea á un pais es— Los dos objetos principales del concilio de Basilea
trangero, que no olvidasen la ley del Señor, y que eran la reunión de los griegos á la Iglesia romana y
no cayesen en la idolatría. Este es, en efecto, el obje. la reforma general de la Iglesia, tanto en la cabeza
to de la carta de Jeremías á los judios de Babilonia, como en los miembros, segun el proyecto que se ha
que forma el capítulo sesto de Baruch. bia formado en el concilio de Constanza. En conse
Pero como los judios no quisieron reconocer por cuencia de esto, declaró en su segunda sesion que
libros sagrados mas que los que tenian en hebreo, no tenia su poder inmediatamente de Jesucristo; que to
han comprendido en su cánon la profecía de Baruch; y dos, hasta el pontífice, estaban obligados á obedecer
or esta razon no se encuentra en los catálogos de los le en lo concerniente á la fé, á la estirpacion del cis
ibros sagrados, dados por Orígenes, por Meliton, ma y á la reforma general de la Iglesia en su cabeza y
por S.. llario, por S. Gregorio Nacianceno, por San en sus miembros. * -

Gerónimo y por Rufino; pero es de presumir que la Este decreto se tiene por confirmado por el mismo
mayor parte le comprendieron bajo el nombre ¿ Je - pontífice, puesto que dió una bula por la que declaró
remías, como hicieron los Padres latinos. El concilio que aunque habia anulado el concilio de Iasilea, lejí
de Laodicea, S. Cirilo de Jerusalen, S. Atanasio y timamente reunido, sin embargo, para evitar disensio
S: Epifanio ponen, en sus catálogos á Jeremías y á nes, reconocia que el concilio se continuó legítima
Baruch. S. Agustin y otros muchos Padres citan las mente desde su principio, y debia serlo en lo sucesivo;
rofecias de Baruch con el nombre de Jeremías: y en que aprobaba lo que habia ordenado y decidido, y de
a lglesia latina, lo que se leia de Baruch en el ofi claraba nula la disolucion que habia dictado. Esta bu
lio divino, era leido bajo el nombre de Jeremías. la se recibió y publicó en la sesion diez y seis, el 5 de
Los protestantes se prevalen inoportunamente de febrero de 13. El concilio formó despues muchos cá
la opinion de los judios, del silencio de los Padres y nones disciplinales sobre las costumbres del clero, y
de la preocupacion en que muchos han estado, res— condenó y suprimió las analas,
pecto de la profecia de Baruch: todo lo que contiene Pero despues de la sesion veinte y cinco, celebrada
es edificante y conviene al carácter de un verdadero en 137, el pontífice trasladó el concilio de Basilea á
profeta y á las circunstancias en que se hallaba Ba— Ferrara, y dos años despues á Florencia. -

ruch. S. Ireneo, Tertuliano, S. Cipriano, Eusebio, Como los Padres de Basilea se obstinasen en conti
S. Ambrosio, S. Ilario, S. Gregorio Nacianceno, San nuar reunidos en este punto y procediesen jurídica
Basilio, S. Cirilo de Alejandría, S. Juan Crisóstomo, mente á la deposicion del pontífice, este concilio dejó
S. Agustin, S. Bernardo y una multitud de comenta de ser mirado como lejítimamente reunido; asi que los
dores han mirado como una profecia de la encarna Padres se retiraron poco á poco, y conocieron que to
cion del Verbo estas palabras de Baruch, c. 3, y.36: do lo que hiciesen no tendria autoridad alguna:
«El es nuestro Dios, que dió la ciencia á Jacob, su Es de lamentar que este concilio no haya tenido un
siervo, y á Israel, su muy amado. Despues de esto éxito mas feliz; los decretos sobre la disciplina que se
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formaron en él fueron muysábios. Muchos, sin embar plos ni cátedra pontifical, ni altar, ni reliquias ni in
go, han sido observados sobre todo en Francia, como cienso, ni fuentes bautismales; parece que las han
el relativo al establecimiento de profesores de lengua construido por el modelo de las sinagogas los judios.
hebrea y griega en las universidades, la comunicacion Todo lo que han suprimido habla y reclama contra la
con los escomulgados, la prescricion en favor de los innovación que han hecho; estos son testigos cuya voz
que han poseído pacíficamente un beneficio durante no acallarán jamás.
tros años, la recitacion del oficio divino, la supresion
de las espectativas de la corte de Roma, los privile— Rasumides ó Basil idianos. A principios del
gios de los graduados, etc. siglo II Basilides de Alejandria aferrado en lafiloso
Se dice que el alto clero de Alemania, pide hoy la fía de Platon y de Pitágoras quiso unir sus principios
ejecucion de los decretos de este concilio. Merci de con los dogmas del cristianismo, y formó la secta de
Francia del 2 de diciembre de 1786. los basilidianos.
Las actas originales de este concilio se conservaron Ocupaba entonces á los filósofos la gran cuestion de
en los archivos de la ciudad de Basilea, y hay una co saber de dónde procede el mal en el mundo. Para re
pia auténtica de ellas en la biblioteca de rev. His— solverla pensó Platon que el Ser Supremo, infini
toria de la Iglesia galican. t. 16, l. 7, año ¿ - tamente bueno por naturaleza, no habia criado in
mediatamente el mundo por sí mismo, sino que dióeste
Basílica. Este nombre griegosignifica casa real: encargo á inteligencias inferiores á quienes habia
se ha dado á las iglesias de los cristianos, porque se dado el ser, y que el mal que se hallaba en él proce—
las ha considerado como los palacios del rey de los re dia de la torpeza é impotencia de estos espíritus se
yes, en los que sus adoradores acuden á tributarle sus cundarios. Semejante suposicion no hacia mas que
homenages; así se llamaron por los escritores del l." evadir la dificultad ¿cómo el ser infinitamente bueno,
y 5." siglo. Señor de criar el mundo por sí mismo, encargó esto
Segun Belarmino, los cristianos distinguian entre á artífices cuya torpeza é impotencia debia preveer?
las basílicas y los templos. Las primeras eran los edi No obstante, abrazaron esta hipótesis los primeros
ficios destinados á las reuniones de los cristianos, y á heresiarcas, Simon, Menandro, Saturnino, Basilides,
la celebracion de los santos misterios; por templos se y sus secuaces que se tomaron el nombre de gnósticos
entendian los templos de los paganos destinados á inteligentes ó filósofos; tuvieron la temeridad de for—
ofrecer sacrificios sangrientos y sacrificar animales. mar la genealogía y la historia de estos supuestos es
Por esto, algunos antiguos, como Minucio Felix, Orí píritus subalternos, y darles nombre, &c.
genes, Arnobio y Lactancio han dicho que los cristia Supusieron tambien que las almas habian ecsistido
nos no tenian templos, y cuando los paganos los acu y pecado antes de unirse á los cuerpos, que Dios para
saban por esto, los mismos escritores respondieron, castigarlas las habia sometido aqui abajo al imperio
que el santuario mas digno de Dios era el alma del de los espíritus inferiores, y que cada uno de estos
hombre de bien. No se debe deducir de aqui, que los espíritus gobernaba una nacion. Esta era tambien la
cristianos no tuviesen entonces edificios consagrados idea de Celso, de Juliano y de la mayor parte de los
al culto del Señor: probaremos lo contrario en la pa— filósofos eclécticos; sobre esto fundaban la necesidad
labra lgLEsIA; pero se evitó darles el mismo nombre de tributar culto á dichos espíritus, por cuyo medio
ue á los edificios destinados á la idolatria, prefirien pretendian obrar prodigios.
o el llamarlos basílicas. Segun Basilides, el espíritu ó el ángel que gober
En el 5.” siglo en el Occidente se entendia naba la nacion judia, era uno de los mas poderosos;
por Iglesia la catedral, y se llamaban basílicas las por esto habia obrado tantos milagros en favor suyo:
iglesias dedicadas á los mártires y á los santos. His pero como él habia querido por ambicion sujetar á los
toria de l“Acad. des inscript, tom. 12, in 12 pág. 811. demás espíritus á su imperio, estos habian inspirado á
Parece que la forma y ¿ de las iglesias cristia los pueblos que gobernaba ódio contra los judios. Asi
nas hahian sido delineadas sobre lo que se dice en el las guerras, las desgracias, los reveses de las nacio—
Apocalipsis c., 6, 7. S. Juan hace en él una descrip nes eran efecto de la envidia y de las pasiones de los
cion de la gloria eterna esactamente parecida á la espíritas que gobernaban en el mundo.
que hace S. Justino de las reuniones de los cristianos, Por último, que Dios compadecido habia enviado
Apol. 1. n. 65 y sig., y del modo como celebraban el á su hijo ó inteligencia, bajo el nombre de Jesucristo,
oficio divino. S. Juan habla de un trono en el que es. para libertar de esta tiranía á los hombres que creye
tá sentado el presidente de la reunion ó el obispo, de sen en él. Segun Basilides, Jesucristo para establecer su
asientos colocados á los dos lados para 2 ancianos fé, realmecte habia obrado los milagros que le atri
ó sacerdotes, este es el coro. En medio y delante del buian los cristianos, pero no tenia mas que un cuerpo
trono hay un altar en el que está colocado el cordero fantástico, y las apariencias de hombre; que durante
en estado de víctima; debajo del altar están las reli su pasion tomó la figura de Simon Cirineo, y que éste
liquias de los mártires. Delante un ángel ofrece á Dios, le dió la suya: asi los judios crucificaron á Simon en
bajo el símbolo del incienso, las oraciones de los san lugar de Cristo que se burló de ellos, y se subió al
tos ó de los fieles. Habla de una fuente de agua que dá cielo, sin ser conocido de ninguno.
la vida; es el baptisperio ó las pilas bautismales. De esto deducia Basilides que los mártires que su
Por la forma que los primeros cristianos dieron á frian por su religion no morian por Jesucristo sino por
sus iglesias es fácil juzgar si son los católicos los que Simon, que era el que habia sido crucificado. Decia
han abandonado la creencia de la primitiva Iglesia, ó tambien que no era crímen entregarse á los deseos
los protestantes. Estos últimos no tienen en sus tem desarreglados de la carne, porque eran inspirados al
 BAS 220) BAS
alma del hombre por los espíritus á cuyo poder la en sus narraciones, y que han exagerado los errores
habia Dios sujetado, y estos deseos eran involuntarios. de los sectarios Para que esta réplica tenga un viso
S. Clemente dº Alec. Strom. l. 3, pág. 51. &c. de justicia, era necesario empezar probando que todos
Este heresiarca, preocupado por el pitagorismo y los sectarios de Basilides enseñaron constantemente la
por las supuestas propiedades que Pitágoras atribuia misma doctrina que él, y que ninguno de ellos pasó
á los números, pensó que la unidad, símbolo del sol, el mas allá. Pero ¿en qué secta de hereges ha sucedido
número 7 relativo á los 7 planetas y el 365, que es— esto? Es muy posible que los basilidianos, que fueron
resaba los dias del año ó las revoluciones del sol, de conocidos de S. Ireneo en el Asia menor, y de Tertu
ian tener propiedades, maravillosas, el determinar liano en Africa, no siguiesen absolutamente las mis
al espíritu gobernador del mundo á obrar prodigios; mas opiniones que aquellos cuyas obras habia leido
acerca de esto fundó su confianza en la heurgia, en la S. Clemente de Alejandria en Egipto: puede haber
mágia, y en los talismanes. Sostuvo que el nombre de variedad, y aun º en las narraciones de estos
Abracses ó Abrares, cuyasletras en griego componen Padres, sin que haya motivo para acusarlos de ig
el número 365 impreso en una medalla con la figura norancia, de preocupacion, ó de infidelidad, Hé aquí
del sol y algunos otros signos, era un talisman podero lo que un historiador juicioso no hubiera dejado de
sísimo, y aun que este debia ser el nombre de Dios. notar. Mosheim es culpable de la misma injusticia.
Consiguientemente, los basilidianos llenaron el mundo Historia cristiana, siglo II, S. 6 y siguientes.
de abraacas de todas clases, y el P. Monfaucon ha he Tambien es muy mal método, para justificar á un
echo grabar muchas. - herege, el pretender que no ha podido enseñar tal
Algunos cristianos poco instruidos se dejaron sedu error, porque ha ¿o otra opinion que no con
cir por estos desvarios, é hicieron tambien unos abra viene con él. Está bastante probado que tanto la doc
acas en honor de Jesucristo; los Padres de la lglesia se trina de los antiguos hereges como la de los modernos,
levantaron contra esta supersticion. es un tejido de contradicciones, y que ordinariamente
Basilides enseñaba tambien lametempsyscosis como todos raciocinan muy mal.
Pitágoras y negaba la resurreccion de la carne. Com Tampoco es muy cierto, segun la comun creencia
puso un Evangelio falso, ó mejor dicho un largo co de los basilidianos, que el ángel ó espíritu que habia
mentario sobre los Evangelios, puesto que Eusebio criado el mundo fuese un ser bueno que tuviese in
nos dice que escribió 2 libros sobre los Evangelios, tencion de agradar al Dios Supremo, y de obrar el
y que forjó profecias con el nombre de barcabas y de bien; porque segun la confesion del mismo Beauso—
barcoph; y suponia dos almas diferentes en el hom bre, otros hereges sostenian que el Criador, ó mejor
bre. dicho, el formador del mundo, era un ser malo.
Sobre esta esposicionque hemos compendiado cuan Desde el momento que se supone la eternidad de la
to nos ha sido pesible, tenemos que hacer reflexio materia no se trata ya de creacion propiamente di
nes importantes. 1." Las heregias antiguas han sido cha. Tenemos la desgracia de no ver como Beauso
la obra de los filósofos, y el efecto de su terquedad bre un grande esfuerzo de la imaginacion en el sis
en querer conciliar los dogmas del cristianismo con tema de Basilides para esplicar los males del mun—
sus vanos sistemas, cuando por el contrario la filoso do sin ofender las perfecciones del Dios Supremo;
fia debia haber corregido é ilustrado con las luces de los ignorantes, que atribuyen al demonio todo lo ma
la revelacion. 2." La fuente de la mayor parte de los lo que les sucede, no hacen un grande esfuerzo de
errores antiguos ha sido la célebre cuestion del origen imaginacion. Por poco que se reflexione, se concibe
del mal, y aun hoy dia es el fundamento de diversos que Dios, aunque infinitamente poderoso y bueno, no
sistemas de incredulidad, y es imposible darle unaso ha podido hacer nada que no fuese limitado, y por
lucion satisfactoria, si no se adoplan los principios de consiguiente imperfecto y sujeto á defectos; y que
la teologia cristiana.3." Los heresiarcas mas antiguos la suposicion de los dos principios no resuelve abso -
no se alrevieron á disputar la verdad de la historia lutamente la dificultad.
evangélica, de las acciones y milagros de Jesucristo, Mucho menos acusaremos á los Padres de haber
porque ellos han procurado acomodarlos con su sistema; invenlado una fábula al decir, siguiendo la idea de
sin embargo, era bien reciente la fecha de estos hechos los basilidianos, que Jesus antes de ser crucificado
para haber podido probarconcerteza su verdadó false cambió su cuerpo con el de Simon Cirineo, y que
dad. ..." Algunos incrédulos modernos han acusado á éste habia ocupado su lugar; muchos de ellos han si
S.Clemente de Alejandria y á los demas antiguos Padres do por otra parte demasiado ridículos para imaginar
el atribuir falsamente á los gnósticos una moral y una este absurdo, aunque quizá Basilides no lo hubiese di
conducta detestables; pero esta moral se derivaba evi. cho, jamás, y que háya pensado de muy diverso
dentemente de sus principios, y es imposible que es modo.
tos razonadores no se hayan apercibido de ello. Se No se halla mejor probado el que los basilidianos
renovó por las sectas fanáticas del siglo XIV, y en nunca han deprimido el martirio; Beausobre no los
ellas se han visto renacer los mismos desórdenes. disculpa sino por conjeturas, y por via de conse—
Beausobre, que ha tenido por punto capital el jus cuencia, género de apología que no puede prevalecer
tificar á los hereges y centradecir á los Padres de la contra testimonios espresos.
Iglesia, ha diserlado largamente sobre los Basilidianos. No rehusa tampoco el absolverlos del crímen de
ist. del Maniq. tom. 2, lib. ... Dice ¿ en general, mágia, porque esios hereges temian confianza en el
respecto á las herejias antiguas, no se debe fiar mucho poder de los pretendidos genios ó espíritus espar
en los Padres de la Iglesia; que la mayor parte no han cidos en la naturaleza; no se halla muy contento con
hablado de ellas mas que por oidas, que no convienen probar que nunca recurrieron á los que ellos supo
 l3AS 221) BAS
mian malos y malhechores, sino á los que creian in más se ha tocado. El P. Le Brun ha dado tambien
capaces de hacer mal. Una de estas malas prácticas una noticia de ella. Esplicacion de las ceremonias de
conduce infaliblemente á la otra. Por la misma ra la misa, t, , p. 372. V. LITUnGIA.
zon no confesaremos que los Padres han calumniado Todos los críticos antiguos y modernos han hecho
á los basilidianos, cuando los han acusado de una justicia á la elocuencia, á la erudicion y á la pure
moral detestable con respecto á la impureza, y de za de estilo de S. Basilio. Focio, Erasmo y Rollin
una conducta arreglada y conforme con ella; si en no han vacilado en proponerle como un perfecto mo
todas las sectas ha habido algunos hombres que han delo de oratoria. Pero los protestantes han atacado
conservado el pudor natural y la virtud, tambien su moral, y los incrédulos no han respetado sus vir—
ha habido otros que han llevado las consecuencias tudes; tan mal fundadas estan las acusaciones de los
de sus errores hasta donde podian llegar, y que no unos como las de los otros.
se han avergonzado de practicarlas. Es muy natural Barbeyrac en su tratado de la moral de los Padres,
que se haya tenido por espíritu general de sec— c. 11, acusa á S. Basilio de haber enseñado que el
ta una conducta que era comun entre sus miem— ¿ hiere de muerte á su enemigo, aun defendién—
bros. Mosheim , menos preocupado que Beausobre, ose, es reo de muerte; que nunca es lícito, matar ni
confiesa que una gran parte de los gnósticos deducian aun en la guerra; que un cristiano no puede sin pe
de sus principios una moral práctica muy licencio car tener un pleito, ó prestar un juramento; no per
sa, Hist. crist. proleg. c. 1, S.36. mite el matrimonio entre dos personas que viven en
Mas de una vez nos veremos precisados á repetir la fornicacion sino por evitar un mal mayor; reco
estas mismas reflexiones con respecto á las heregías mienda á los monges un esterior triste, desaseado
antiguas ó modernas, porque muchos de los protes— y descuidado, á pesar de la leccion contraria que Je
tantes que han hablado de esto lo han hecho con la sucristo da en el Evangelio.
misma prevencion que Beausobre. Lo mas singular es Si en vez de enseñar una moral muy severa los
que estos críticos quieren que miremos su preocupa Padres de la Iglesia hubiesen tenido mácsimas relaja
cion como una prueba de imparcialidad. das, se declamaria contra ellos con mucha mas acri
tud. Ya algunos incrédulos de nuestros dias los han
Basilio (san) obispo de Cesarea en Capadocia, acusado de haber tenido mas presente la doctrina es—
y doctor de la Iglesia, que murió el año 379. Dom peculativa que la moral, y de haber preferido la
Garnier y Dom Prudenció Marand, benedictinos, han ortodoxia á las costumbres. Pero por muy austeras
publicado una hermosa edicion de sus obras en grie que fuesen sus lecciones, eran sin embargo practi
go y latin en tres volúmenes en folio en 1721 y 1730. cadas por un buen número de cristianos fervorosos;
Él tomo primero contiene el Hearameron, que es esto nos parece que demuestra que la moral de los
una esplicacion de la obra de los seis dias de la Padres no era tan ecsagerada como se pretende.
creacion, trece homilias sobre los salmos, un co Se dice que llevaron muy al estremo las reglas de
mentario sobre Isaias, y cinco libros contra Eunomio, paciencia que predicaron á los fieles, y todos los dias
que son una reputacion del arrianismo. El segundo se acusa á los cristianos de no haber sido bastante su
contiene veinticuatro homilias sobre diferentes mate fridos, ya con los paganos en tiempo de las persecu—
rias de moral y sobre las fiestas de los mártires, di ciones y ya con los hereges, cuando estos abusaba de
versos tratados de moral llamados ascéticos y las re la proteccion de los emperadores. ¿Cómo contentará
glas grandes y pequeñas para los monges. Se con - tan estravagantes censores?
viene generalmente en que las constituciones monás Es necesario tener presente que S. Basilio escribia
ticas atribuidas á S. Basilio no son suyas. En el ter— en el tiempo en que los arrianos, protegidos por el
cer tomo se encuentra el libro del Espírita Santo, emperador Valente, se entregaban al pillage en to—
donde prueba la divinidad de esta tercera persona de do el imperio; nadie podia resistirlos sin que pare
la Santísima Trinidad por la sagrada Escritura y ciese que se rebelaba contra el emperador; los Pa
por la tradicien, y trescientas treinta y seis cartas dres de aquel tiempo tenian pues razon en predicar
sobre diferentes objetos. Se le ha atribuido falsamen la paciencia á los católicos y en tomar en todo su ri
te el libro de la virginidad, aunque parece escrito en gor las palabras del Evangelio. V. LA DEFENSA DE s1
MISMO).
el mismo siglo.
Tienen los orientales una liturgia que lleva el nom Habian concebido una idea muy elevada de
bre de S. Basilio que estaba en práctica en las Igle santidad del matrimonio; era necesario inspirar e
sias del Ponto, y que usan todavia los jacobitas, los mismo sentimiento á los cristianos, porque las leyes
griegos melquitas y los colos de Egipto y de de los emperadores lo habia descuidado, y la licen—
Abisinia. El abate Renaudot en el tomo primero de cia del paganismo era estremada en este particular:
su coleccion de liturgias orientales la ha publicado pero no vemos en qué pudiese ser peligrosa la moral
traducida del colo, despues en griego y en latin. Pe de S. Basilio.
ro segun observa con esactitud, no se debe creer Queria que los monges diesen señales esteriores de
que S. Basilio la haya hecho y compuesto toda, sino lo pobreza y mortificacion de su estado; en qué con
que retocó la liturgia que ya estaba en práctica en tradecia al Evangelio? Cuando Jesucristo prohibió
su Iglesia, añadió algunas oraciones, y corrigió otras aparentar hipócritamente un esterior triste y un
sin alterar el fondo. La conformidad de esta liturgia semblante estenuado por el ayuno, no se dirig ya á
con otra multitud de liturgias antiguas demuestra los monges. Hoy se escandalizan de que no observen
que todas han sido hechas por un modelo primitivo, rigorosamente las lecciones de S. Basilio.
seguido desde los los tiemqós apostólicos, y al cualja Conocida es la firmeza con que respondió al empe
TOMO l. - 3.
 BAS 222 BAT
rador Juliano que intentó seducirle, y despues ame oficio en griego. Véase á LE MIRE, de orig. ordin. re
nazó con destruir la ciudad de Cesarea sino entrega lig. No nos admirará tanto la austeridad de las reglas
ba al fisco mil libras de oro. La misma tuvo con el de S. Basilio con solo observar que en general la vida
emperador Valente cuando le amenazó con el des de los orientales es mucho mas sóbria que la nuestra,
tierro y la muerte sino entregaba las iglesias á los y que el clima ecsige mucho menos alimento. Alli se
arrianos. «El que no tiene, le dijo, mas que hara come poca carne; as legumbres, las hortalizas, los
pos y algunos libros, no teme ser despojado. Yo mi frutos son mas suculentos y mas nutritivos que los
ro como mi patria , no el suelo en que nací, sino nuestros; se necesita en estos paises ser muy sóbrio
el cielo. Un cuerpo debililado como el mio no pue para conservar la salud; el pueblo vive en ellos al aire
de padecer mucho tiempo: terminando la muerte mis puro, casi sin ningun resguardo, sin necesitar las
trabajos me reuniré cuanto antes á mi Criador». precauciones que se toman en los paises septentriona
Muchos incrédulos modernos han tachado de cri les. La vida de los monges en la Tebaida era, hablan
minal esta resistencia á las órdenes del emperador. do con propiedad, la de los pobres de Egipto, y de
Si le hubiera obedecido, estos mismos censores le acu
sarian de debilidad. Tambien le acusan de no haber
sºnas
que no estan acostumbradas á superlui
d(leS.

dado á su amigo S. Gregorio Nacianceno mas que un

pequeño episcopado. Sin duda ignoran que S. Grego * Baskiros. Estos pueblos ignorantes dicen
rio habia renunciado voluntariamente la silla de
que poseen libros negros cuyo testo ha sido, segun
Constantinopla, y que no deseaba, como S. Basilio, ellos, compuesto en el infierno. Segun su parecer los
mas que el retiro, el descanso y la libertad de ser— intérpretes de estos libros saben lo pasado, el pre
vir á Dios lejos del tumulto del mundo. Felices nos sente y lo futuro, y mantienen relaciones íntimas con
otros que no tenemos que justificar á los Padres mas los demonios, á los que pueden mandar hacer los ma
que por el heroismo de sus virtudes: fueron demasia yeres milagros. Nada iguala la veneracion de los bas—
do puras para agradar á espíritus perversos y á co kiros hácia sus Schaitan-Kuriazi ó el que ve el de
razones corrompidos. monio: á ellos recurren en las calamidades públicas
y privadas. Estos ¿
que no tienen idea alguna
Basilio (orden de s.) Es la mas antigua de de la estructura del globo creen que las estrellas es—
las Ordenes religiosas. Segun la opinion mas gene tan colgadas en el aire y sujetas al firmamento con
raltomó su nombre del santo obispo de Cesarea de quien grandes cadenas de hierro, que la tierra descansa
acabamos de hablar, que dió reglas á los cenobilas sobres tres enormes pescados, uno de los cuales ya
de oriente, aunque no fuese el fundador de la vida está muerto, prueba cierta del prócsimo fin del man
monástica. En efecto, atestigua la historia de la Igle do; afirman que en el momento del nacimiento de
sia que hubo anacorelas y cenobitas, sobre todo en cada individuo, se escribe en el libro de los deslinos
Egipto, mucho antes de S. Basilio. Es muy probable el número de dias que ha de pasar sobre la tierra, y
que este santo doctor solo escribió lo que habia ob la cantidad de alimentos que ha de consumir. Entre
servado en las comunidades de monges de la Tebaida ellos, no tiene fuerza un testimonio, aun apoyado
que habia visitado. con juramento, sino cuando este se hace sobre la tier—
Esta Orden floreció siempre en oriente, y aun se ra del cementerio, aun cuando se haga en una casa
conservó despues del siglo IV. Casi todos los ó en un templo.
religiosos que en la actualidad ecsisten, en aquellos A corta distancia del pueblo de Biliarsk se en
paises bajo el nombre de Caloyeros (1) siguen la re cuentra un cementerio mahomelano llamado Balyn—
gla de S. Basilio, aun los que tomaron el nombre gruss, muy venerado de los tártaros y de los baski
de S. Antonio. Trece siglos de duracion nos parece ros; le tienen como sagrado; y creen que los devotos
que prueban que esta regla no es tan escesivamente musulmanes, cuyos restos mortales yacen en este cam
rigorosa como algunos críticos han pretendido. po, hacen todos los dias algun milagro; en el verano
Se dice que habiéndose retirado S. Basilio á un de es un lngar de peregrinacion. Cuando alguno cae
sierto de la provincia del Ponto el año 357, perma enfermo, sus parientes llaman al sacerdote ó mollah
neció en ella hasta el de 362 con solitarios á quienes que recita algunas palabras del coran, y hace fre
prescribió la manera de vivir que debian observar, al cuentes aspersiones de saliva sobre los ojos y la cara
hacer profesion de la vida religiosa. Rufino tradujo del paciente; estas oraciones y el agua clara son los
estas reglas al latin, lo que las dióá conocer en oc únicos medios que emplean para curar al enfermo.
cidente, pero no se observaron en él hasta el siglo XI. Los baskiros usan con mucha frecuencia de los fil
En el año 1057 fue cuando los monges de san Ba tros. Los restos de una supersticion tan grosera se de
silio se establecieron en occidente. Gregorio XIII los bilitaron mucho desde el establecimiento en Oren
reformó el año 1577, y puso á los religiosos de Es— burgo de una escuela llamada instituto de Naplinjeff.
paña, de Italia y de Sicilia bajo una misma con
gregacion. Tambien en este tiempo el cardenal Bes * Batalkos Pueblos de la isla de Sumatra.
sarion, ¿? de nacion y religioso de esta Orden, Creen en la ecsistencia de un Ser Supremo á quien lla
compendió las reglas de S. Basilio, y las distribuyó man Debata—Hasi asi, y dicen que este Ser despues
en 23 artículos. El monasterio de S. Salvador de Me— de haber creado el mundo confió su direccion á sus
sina, en Sicilia, es el principal de la Orden en occi tres hijos Batara Gura (Dios de las clemencia), Sori
dente y pasa por cosa cierta que en él se celebra el Pada (Dios de la justicia) y Mangana Bulan (el autor
del mal, el tentador eterno), quienes lo gobiernan por
(1) Monges griegos de la Cºrden de S. Basilio. medio de sus tenientes ó ¿ Estos están divididos
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en tres clases con diferentes grados, y cada uno tiene rar el pecado. Véase la disertacion sobre los tres bau
funciones propias. Los Batakos tributan culto tam tismos, Biblia de Avignon, t. 13, p. 199.
bien á la serpiente Naga Padoha que sostiene á la Al bautismo de la Iglesia cristiana los Padres le dan
tierra. muchos nombres relativos á sus efectos espirituales
Veneran una infinidad de divinidades, ángeles como adopcion, renacimiento, regeneracion del al
tutelares, demonios buenos ó malos á quienes te ma, iluminacion, etc.
men hasta el estremo de estar siempre con un terror Este sacramento ha sido desechado por muchos
supersticioso. Cada aldea, tiene su sacerdote, cuyas antiguos hereges de los primeros siglos, como los as
funciones consisten en esplicar los libros sagrados, en codrutas, marcosianos, valentinianos y quintilianos,
señalar las ofrendas con las que se puede aplacar la los que pensaban que la gracia que es un don espiri
cólera de las divinidades malhechoras, y en indicar tual, no podia ser comunicada ni espresada por sig—
los dias dichosos, bien consultando las tablas astroló— nos sensibles. Los arcónticos los desechaban como
gicas, bien por la inspeccion de las entrañas de al una invencion del dios Sabahoth, es decir, del Dios
gun animal, perro, puerco ó ave. Solo cuando el de los judios, al que consideraban como un principio
Batako quiere hacer la guerra, acometer alguna em malo. Los seleucianos y los hermianos no querian que
presa importante ó cuando ha sufrido alguna desgra— se administrase con el agua, sino que ellos emplea
cia recurre á su Datu ó sacerdote para que le diga á ban el fuego diciendo, que S. Juan Bautista aseguró
qué demonio debe aplacaró qué víctima sacrificarle. que Jesucristo bautizaría á sus discípulos en el fuego.
En estos casos convida á sus amigos á una fiesta que Los maniqueos, paulicianos y massalianos tampoco lo
dura tres dias y tres noches en los cuales no se cesa admitian; otros alteraron su forma. Menandro bau.
de comer, beber bailar. El dia tercero, en medio de tizaba en su propio nombre ; los eluseos invocaban
la danza, uno de los convidados que hace el papel de en él á los demonios: los montanistas unian el nom—
compadre del Datu cae de repente en tierra y aparen bre de su gefe Montano y de Priscila su profetisa, á
la estar sin sentido. Un momento despues se levanta los sagrados nombres del Padre y del Hijo. Los sabe
de repente, y dice que es el demonio que han tratadolianos, los marcosianos, los discípulos de Pablo Sa
de aplacar, que viene á tomar parte en el festin, res—
mosatense; los eunomianos y algunos otros hereges
pondeálas preguntas que le hace el que preside el fes. enemigos de la Trinidad , no bautizaban en el nom
tin, dando á sus palabras un aire de prediccion, y le bre de las tres personas divinas; por esto la Iglesia
promete interceder por él ante las divinidades supe— desechaba su bautismo y admitia de los demas he—
riores; en seguida se deja caer otra vez en tierra. Al reges con tal que no alterasen la forma prescrita.
instante se levanta como si se despertase de un sueño Los cristianos orientales, griegos, jacobitas, sirios,
profundo; y se concluye la comedia. Los libros de los egipcios y etiopes, los nestorianos y los armenios, mu
Batakos tratan principalmente de la guerra, de la chos de los cuales se separaron de la Iglesia ro—
religion, de los sacrificios, de las ceremonias y de mana, hace 1200 años, han conservado con respec—
las fómulas de las oraciones; en fin, de las enferme— to al bautismo la misma creencia que ella. Todos re
dades y de los medios de curarlas, y no son mas conocian su necesidad absoluta, y le atribuian los mis
que un legido de fábulas y absurdos sin ningun pre mos efectos que nosotros; y consideran tambien solo
cepto de moral. Los Batakos creen en la vida futura, el agua natural como materia de este sacramento; lo
en la que el alma se verá libre del dolor: pero parece administran por medio de tres inmersiones.
que no tienen idea alguna de las recompensas y de los Solo tienen una pequeña diferencia en la forma, que
castigos futuros. en lugar de decir, como nosotros, yo te bautizo, etc.,
dicen: N. es bautizado en nombre del Padre, etc. Ob—
IBautismo, sacramento que borra el pecado ori servan los exorcismos y demás ceremonias del bau—
ginal, nos hace cristianos é hijos de Dios y de la Igle tismo, pero las suprimen en caso de necesidad. Per—
sia. Lo instituyó Jesucristo cuando dijo á los apósto— petuidad de la fé, tom. 5, lib. 2, c. 1. y sig. Confie—
les, en S. Mat., c. 38, y. 19: «id á enseñar á todas san los protestantes que el bautismo es un sacramen
las naciones, y bautizadlas en nombre del Padre y del lo, pero no todos reconocen igualmente su necesidad
Hijo y del Espíritu Santo». y sus efectos; suprimen en él las ceremonias.
En general la palabra bautismo significa locion, Por consiguiente los teólogos católicos se ven preci
inmersion, del griego BApro ó BAprvoso yo lavo, yo sados á examinar: 1.° Cuáles son la materia, la for—
meto en el agua. En todas partes se entiende que la ma y las ceremonias del bautismo. 2." Cuál es el mi—
accion de lavar el cuerpo es un símbolo de la purifi nistro ó por quién se puede administrar válidamente
cacion del alma. Los judios llamaban bautismo á cier este sacramento.3."Quiénes son capaces de recibirlo.
tas purificaciones legales que practicaban con los .." Qué efectos produce.5." Si es de necesidad, 6."Cuál
prosélitos despues de la circuncision; se llama lo mis es el destino de los que mueren sin haber tenido la fe
mo la que prácticaba S. Juan en el desierto respecto licidad de recibirlo; procuraremos compendiar estas
de los judios como una disposicion de penitencia pa cuestiones.
ra prepararlos ya para la venida de Jesucristo ya á l. De la materia, forma y ceremonias del bautismo.
la recepcion del bautismo que debia instituir el Me El sentimiento universal de todos los cristianos es que
sias. Este es absolutamente diferente del bautismo de el agua natural de fuente, rio ó de lluvia, es solo la
S. Juan por su naturaleza, su forma, su eficacia y su materia con que válidamente se puede bautizar; Jesu
necesidad, cono lo prueban los teólogos contra la cristo lo determinó asi diciendo: «Si alguno no ha sido
pretension de los luteranos y calvinistas. Jesucristo regenerado por el agua y por el Espíritu Santo no pue
es quien ha dado á esta ceremonia la virtud de bor de entrar en el reino de Dios. Joan., c. 3, y.5. Cual
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uier otro líquido, ya natural, ya artificial, no pue impresa en su frente, y del vestido blanco con que
emplearse para bautizar. Asi lo ha establecido el se le revestia. Era necesario todo esto para dar al
concilio de Trento en la ses. 7, de Bapt. can. 2. Pero nuevo cristiano una idea elevada de la gracia que re
la Iglesia cristiana, atenta siempre á profesar su fé por cibia y de las obligaciones que contraia. Tratando es
las ceremonias, desde los primeros siglos ha estado en las ceremonias de supersticiones, y suprimiéndolas
el uso de bendecir el agua de las fuentes bautismales como abusos, han demostrado evidentemente los pro—
con oraciones particulares; por parte de los protestan— testantes que su creencia con respecto al bautismo no
tes ha sido una temeridad condenable el suprimir y es la misma que la de la primitiva Iglesia; si esta hu
vituperar esta bendicion. V. AGUA BENDITA, AGUA DEL biera tenido una idea tan pequeña y tan desprecia
BAUTISMo. ble como ellos, hubiera bautizado tambien sin ningun
La forma ó las palabras por las que se administra aparato, verliendo el agua desde una jarra sobre la
este sacramento son: Yo te bautizo en nombre del Pa cabeza del bautizado en una fuente plana. Por los ex
dre y del Hijo y del Espíritu Santo, las mismas de Je orcismos del bautismo era por los que á principios del
sucristo. En la Iglesia griega dice el sacerdote: N. es siglo V se probaba, principalmente contra los pela
bautizado en nombre del Padre, etc. Antiguamente du gianos, que los niños antes de bautizarse estaban ba
daron algunos teólogos si esta forma era válida, porque jo el poder del diablo, y por lo mismo contaminados
entendian mal el sentido de la formula de los griegos; por el pecado.
creian que significaba que N. sea bautizado, etc. En el Mosheim en sus disert. sobre la hist. eclesiástica,
dia nadie duda de la validez de este bautismo. En al tom. 1.", pag. 215, pretende que muchas ceremonias
gunas iglesias protestantes se habia introducido la cos del bautismo han sido tomadas por los paganos, que en
tumbre de que un diácono verliese el agua sobre la ca particular los exorcismos son relativos á lo que los
beza del bautizado, mientras que el ministro, colocado platónicos creian de los demonios. En su hist. ecles.
en la cátedra, pronunciaba la fórmula del bautismo. del siglo 1, 2 º part., c. , S. 1 y 2, dice, que los
Entonces el bautismo era nulo por no verificarse el apostoles y los discípulos del Salvador toleraron por
sentido literal de las palabras; el ministro no deberia necesidad, ó establecieron por prudentes razones, di
decir yote bautizo, sino yo te hago bautizar; ignoramos ferentes ceremonias relativas á los tiempos y á las
si esta costumbre subsiste todavia en alguna parte. circunstancias. Convenia, dice, en aquellos primeros
Se ha creido siempre, sin disputa, que era absolu— tiempos tener alguna deferencia á las opiniones an
lamente necesaria la invocacion espresa de las tres di tiguas, y á las leyes y costumbres de las diferentes na
vinas personas, y principalmente por esta fórmula del ciones á quienes se predicaba el Evangelio. Beausobre
bautismo es por la que en otro tiempo se probó á los dice que los exorcismos del agua y las unciones del
arrianos y a otros hereges la igualdad y consustancia— bautismo, provienen de los valentinianos.
lidad de las tres personas de la Sma. Trinidad; de Otros pensaron que los apóstoles habian estableci
modo que el bautismo conferido en nombre de Dios ó do en algunas iglesias las ceremonias de los judios,
en nombre de Jesucristo es tenido por nulo. La Iglesia pero Mosheim no es de este parecer. Los incrédulos
ha tenido siempre mucho cuidado en examinar si los no han dejado de afirmar positivamente que nuestras
hereges cambiaban algo en la forma de este sacra ceremonias son restos del paganismo. Mas impetuoso
mento, y siempre que han tenido esta temeridad ha todavia Calvino, dice que han sido inventadas por el
desechado su bautismo. -
diablo.
Algunos incrédulos modernos han escrito que el Impiedad y fanatismo antireligioso. ¿Es creible que
bautismo conferido en nombre de las tres personas se los apóstoles que inspiraron á los fieles tanto horror
adoptó por los sectarios de Platon, que se hicieron hácia los usos, costumbres y prácticas de los paga
cristianos, porque hallaban en él los sentimientos de nos hayan conservado algunas de sus ceremonias, ó
este filósofo sobre la Divinidad. Estos sabios críticos hayan querido escusar sus opiniones? La mayor parte
ignoran sin duda que el mismo Jesucristo fue el que de las ceremonias religiosas habian estado en uso en
dictó y prescribió á sus apóstoles la fórmula, y que tre los adoradores del verdadero Dios antes de ser
sus discípulos bautizaron delante de él. Joan., c., profanadas por los paganos: ¿porqué no se les ha de
y 2. No faila mas que probar que Jesucristo ha sido vuelto á su primer destino? El mismo Jesucristo nos
discípulo de Platon. V. TRINIDAD. habia dado el ejemplo de esto ; sopló sobre los após
En cuanto á las ceremonias que preceden, acom toles para comunicar el Espíritu Santo, impuso las
pañan y siguen á este sacramento, se cree con razon manos á los enfermos, tocó para curar los oidos y la
que son de institucionapostólica; no se hubieran adop boca de un sordo-mudo, puso lodo en los ojos de un
tado tan universalmente si no hubieran tenido por ciego de nacimiento, etc. Exorcizaba á losendemonia
autores á los mismos fundadores del cristianismo. Las dos para libertarlos; algunos incrédulos han dicho
constituciones apostólicas, los sacramentarios mas an que en esto imitaba á los magos. Los apóstoles no tu
tiguos, los Padres del siglo II y III, hacen mencion vieron necesidad de la doctrina de Platon con respec
de ellas, no como de ritos recientemente instituidos, to á los demonios, ni de las ideas de los paganos para
sino como costumbres observadas en todas partes. instituir las ceremonias del bautismo. V. CEREMoNIAs,
Unos hablan de las instrucciones y exorcismos de que EXORCISMOS.
iba precedido el bautismo, otros de la renuncia del Aunque las reflexiones de Mosheim fuesen tan ver—
diablo, de sus , de sus obras y de las prome daderas cuantoson falsas, siempre se deduciria que los
sas que hacia el catecúmeno: otros de la inmersion ó pretendidos reformadores no han imitado la sabidu
infusion en el agua repetida tres veces; y otros de las ria nilacaridad de los apóstoles. Hacequince siglos que
unciones hechas al bautizado, de la señal de la cruz se hallan establecidas y practicadas las ceremonias en
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toda la Iglesia cristiana; los fieles estaban acostum— mente la intencion de Jesucristo y las lecciones de
brados á ellas, y no les daban lugar á ningun error; San Pablo. Del verdadero espíritu de las ceremonias
los innovadores las han desterrado, las han calificado de la Iglesia, S. 16 y sig.
de supersticiones y de idolatria; no han tenido hácia Nos importa pocó el saber si los judios practicaban
las costumbres y habitudes de los catolicos la misma una especie de bautismo respecto de sus prosélitos, y
condescendencia que los apóstoles, segun Mosheim, qué idea tenian de ella; lo que se dice en el Evangelio
tuvieron á las costumbres de las naciones paganas á del bautismo de S. Juan Bautista no nos enseña mu
quienes predicaban el Evangelio: nos parece que no cho; vemos, por la conversacion que Jesucristo tuvo
les honra esta diferencia. En el artículo AGUA BENDITA con Nicodemus con respecto á la regeneracion espi
probaremos contra Beausobre que la bendicion delritual, lo que se admiró este doctor judio de la idea
agua no es una supersticion, ni un rito tomado de los
que Jesucristo le dió de ella. Joan, c. 3, y.3; no hay,
herejes. pues, semejanza alguna entre lo que hacian los judios
Verdaderamente que ha habido algunas ligeras y lo que Jesucristo ha instituido.
modificaciones en el modo de administrar el bautismo; II. Del Ministro del bautismo. Está probado, por
pero los principales ritos se han observado siempre. las actas de los apóstoles y por las epístolas de S. Pa
Antiguamente se administraban por una inmersion blo, que bautizaban á los que creian en Jesucristo
triple, como ejecutan todavia los orientales, y este pero que preferian á este ministerio el de anunciar el
uso ha subsistido en el occidente hasta el siglo XII. Evangelio. 1.” Cor., c. 1, y . 17. Es probable que de
Algunos católicos españoles en el siglo VI no hacian jasen este cuidado á los diáconos y á los legos., Asi,
mas que una inmersion, por temor, decian, de que segun la práctica de la Iglesia se halla establecido
los arrianos visigodos no pensasen que por la inmer— ue los obispos y los presbíteros son los ministros or
sion triple se dividia la trinidad; por esta razon lo— la de este sacramento; pero que en caso de ne
cal no hizo impresion en las demas lglesias. La cos— cesidad pueda administrarse por toda clase de perso
tumbre de bautizar por infusion, vertiendo el agua nas, aun por las mujeres.
sobre la cabeza, parece que tuvo lugar en los paises En el tercer siglo hubo una disputa bastante aca
septentrionales, donde es impracticable el uso del ha lorada para saber si era válido el bautismo adminis
ño en la mayor parte del año, y se introdujo en In trado por los herejes; los obispos del Africa, y, á su
glaterra hicia el siglo IX. El concilio de Catchut, ó cabeza S.Cipriano, sostenian que era nulo este bau
Celchyth, celebrado el año de 816, mandó que el sa tismo, y se apoyaban en la costumbre establecida en
cerdote no se contentase con verter el agua sobre la tre ellos de rebautizar á los que le habian recibido. El
cabeza del niño, sino que lo sumergiese en las fuen— papa S. Esteban les opuso la práctica de la Iglesia de
tes del bautismo. Véase NMERsioN. Quisiéramos saber, Roma que era seguida universalmente fuera del
por qué los protestantes, que hacen profesion de imi Africa, y que era mas antigua que la suya. No inno
tar tan escrupulosamente á la Iglesia primitiva, no vamos nada, les dijo, en esto nos atenemos á la tradi
han renovado el uso de conferir el bautismo por in cion. Regla invariable que la Iglesia católica ha ob
IrlerSIOn.
servado siempre que sigue todavia, que demuestra la
Los escritores eclesiásticos hablan de muchas ce falsedad del hecho de que los protestantes se quie
remonias que se practicaban en otro tiempo en la ad ren aprovechar, á saber: que los apóstoles no habian
ministracion de este sacramento y que ya no se usan, establecido disciplina uniforme, que habian dejado á
ó de las que no quedan mas que ligeros vestigios, tal las diferentes Iglesias la libertad ¿ hacer lo que les
como las de dar leche y miel á los recien bautizados pareciese mas conveniente; y que no habian dado á
en la Iglesia de oriente, vino y miel en la de occiden nadie la autoridad de juzgar, ni de cuidar de ella. Des.
te, y vestirlos con una túnica blanca, y darles en se— pues de algun tiempo de resistencia, los obispos del
guida la confirmacion y la eucaristia. Antiguo sacra Africa conocieron la sabiduria de la regla alegada por
mentario por Grandeolas, 2." parte, p. 1. el papa y la necesidad de conformarse con ella. Véa
El tiempo en que se administraba solemnemente el se REBAPTIZANTES.
bautismo era en las festividades de Pascua y Pentecos Ha quedado, pues, constantemente establecido que
tes, no porque la estacion fuese entonces mas favora es válido el bautismo conferido por los herejes, con tal
ble para los baños frios, como lo ha soñado un médi que no hayan alterado la materia ó la forma de este
co inglés, sino por los dos grandes misterios que se sacramento: lo mismo está decretado por el concilio
celebran en estos dias. D. Claudio de Vert ha avan de Trento. Ses. 7, de bapt. can. .
zado que el origen del bautismo proviene de la cos III. De las personas capaces de recibir el bautismo.
tumbre de lavar los niños luego que nacen: M. Lan Es evidente, que los que recibieron el bautismo de
guet ha probado que Jesucristo instituyendo este sa mano de Jesucristo y de los apóstoles, eran adultos,
cramento, no tuvo consideracion alguna á este uso; y que antes de dárselo, exigian la fe de parte de ellos.
que al decir S. Pablo, que cuando el bautizado estaba «Marchad, dijo el Salvador, enseñad á todas las na
metido en el agua y salia de e la era una figura de la ciones y bautizadlas». Mat, c. 28, y 19. Predicad el
sepultura y de la resurreccion de Jesucristo, no hi Evangelio á toda criatura, el que creyere y se bau
zo mas que desarrollar el verdadero sentido de la ce tizare se salvará, el que no creyere se condenará».
remonia é intencion del Salvador; que las palabras Marc., c. 16, y . 15. Los apóstoles bautizaron á los
de regeneracion, vida nueva, etc., de que se sirve, no que habian creido en la predicacion de S. Pedro. Ac
son parábolas, ni metáforas tomadas de los judios; tas, c. 2, y. 1. S. Felipedijo al eunuco de la reina de
que aunque en la actualidad no se administra el bau Candaces: «Si creeis de todo vuestro corazon, podeis
tismo por inmersion, no deja de espresar suficiente recibir el bautismo», c. 8, y.27. Los anabaptistas,
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y los socinianos han deducido de esto que la fe ac do fuesen mayores, se espondrian á profanar el bau
ual es una disposicion necesaria para recibir el sa tismo, por la apostasía que les inducirian sus
cramento; que siendo los niños incapaces de tener fe, padres.
no deben ser bautizados, y los que lo hayan sido, es En los primeros siglos muchos cristianos diferian
necesario renovar el bautismo cuando lleguen á la su bautismo hasta la muerte y lo recibian en el le
edad de la razon y esten suficientemente instruidos. cho en la última enfermedad; unos obraban asi por
Esta doctrina es una consecuencia natural de la de humildad, porque temian no estar todavia bien dis
los protestantes, que enseñan que la gracia de la jus puestos; otros por libertinaje con el fin de pecar
tificacion no es efecto del sacramento, sino de la fe, y mas libremente con la esperanza de que todos sus
que toda la eficacia del sacramento consiste en escitar pecados se borrarian por el bautismo. La Iglesia no
la fe. De aquí se ha originado otro error, que como aprobó ni á los unos, ni á los otros; se levantó
el bautismo no es el único medio capaz de escilar la fe; fuertemente contra la negligencia de estos últimos;
este sacramento no es absolutamente necesario, y pa declaró irregulares á los clínicos ó gravatarios, es
ra sostenerlo ha sido preciso negar el pecado original: decir, á los que habian sido bautizados en la cama;
asi se encadenan los errores; no sabemos por qué to— el concilio de Neocesarea prohibió elevarlos á las ór—
dos los protestantes no han discurrido lo mismo. Des denes sagradas, á no ser que probasen que no se ha—
de luego respondemos, que el mejor intérprete del bia diferido su bautismo por mal motivo. V. CLí
sentido de la Escritura Santa es la práctica constante Nl COS.
y universal de la Iglesia; ha estado en uso desde En la primitiva Iglesia tampoco se concedia este
principios del cristianismo el bautizar á los niños, co
sacramento á personas reputadas infames, ejercita
mo lo atestigua S. Irenéo, adv. Haer., l. 2, c. 22;das en profesiones criminales é incompatibles con la
Orígenes, S.Cipriano y los Padres posteriores, aun santidad del cristianismo, á no ser que renunciasen á
que no se observase desde luego generalmente este su estado. Tales como los escultores y otros artistas
uso. Tambien se puede probar esto por una carta del que hacian ídolos, las mujeres públicas, los cómicos,
heresiarca Manés, S. Agustin, op. imperf., l. 3, no los cocheros, los gladiadores, músicos y otros que di
ta 187. No lo niegan los socinianos; pero dicen que vertian al público en el circo ó en el anfiteatro; los
es uno de los abusos introducidos en la Iglesia inme astrólogos, adivinos, mágicos, encantadores; los hom
diatamente despues de la muerte de los apóstoles. bres entregados apasionadamente á los juegos del
Añaden que el bautismo de los niños no está fundado teatro, los concubinarios públicos, y los que tenian
en ningun pasaje de la Sagrada Escritura; nosotros lugares de disolucion, etc., y los que prometian abs
defendemos lo contrario. tenerse de ellas, se les sujetaba á prueba. Bingham,
Matth., c. 19, y. 1, dice Jesucristo: «Dejad que Origen ecles., l. 11, c. 5, S. 6 y sig.
los niños se acerquen á mí, pues de ellos es el reino S. Pablo, I. Cor., c. 15, y. 30, dice: «Si no resu
de los cielos». Despues dice en otro lugar que no se citan los muertos, qué harán los que son bautizados
puede entrar en el reino de Dios, sino se está regene por los muertos? De qué les sirve este bautismo? De
rado por el agua y por el Espíritu Santo; luego los aqui pensaron algunos, que se podia bautizar despues
niños son capaces de esta regeneracion. Se dice de al de la muerte á los catecúmenos que hubiesen deseado
gunos de los primeros fieles que fueron bautizados el bautismo: un concilio cartaginés condenó este
con toda su familia, 1." Cor., c. 1, y. 16, etc., sin abuso, otros creyeron que un vivo podia recibir el
esceptuará los niños. Por otro lado se prueba por la bautismo en lugar de un muerto, y asi obtener el per
Escritura contra los anabaptistas, los socinianos y don de sus culpas, Tertuliano habla de esta supersti
los protestantes, que los niños nacen manchados por cion en su libro de Resurrectione carnis, y algunos
el pecado original, que esta mancha no se borra por Padres la han atribuido á los marcionitas. Es eviden
la fé, sino por el bautismo, que este sacramento es te que todos estos sectarios entendian mal el testo de
absolutamente necesario; luego su sistema es el que San Pablo, y que estos abusos no se conocian aun en
escontrario á la Escritura Santa, no el nuestro. Cuan tiempo del apóstol; y los comentadores, tanto católi
donos hablan de los pretendidos abusos introducidos cos como protestantes, no están acordes en la esplica
en la Iglesia, inmediatamente despues de la muerte cion de este pasaje. Véase la Sinopsis de los Crit, so
de los apóstoles, les rogamos sean menos temerarios, bre este lugar y la Disert. sobre el bautismo de los
y que consideren que los discípulos inmediatos de los muertos, Biblia de Avignon, t. 15, p. 78.
apóstoles debieron conocer lo que era abuso y lo que IV. De los efectos del bautismo. Hemos observado
no lo era, por lo menos, también como los razonado— ya muchas de las consecuencias del error de los pro
res del siglo XVI. Por esto el concilio de Trento ha iestantes que enseñan que toda la eficacia de los sa
condenado con razon la opinion de estos últimos con cramentos consiste en la virtud que tienen de escitar
respecto al bautismo de los niños, Ses. 7, de Bapt. en nosotros la fe justificante; pero todavia ha dado
canon 13. Pero no vemos con qué derecho los pro lugar á otros escesos. Muchos sectarios han deduci
testantes, segun sus principios, pueden vituperar á do de esto que el bautismo de Jesucristo no obra mas
los socinianos, ni á los anabaptistas. que el de S. Juan Bautista, puesto que este tenia tam
En la actualidad, se conviene en que no se deben bien la virtud de escitar la fe, y los sentimientos de
bautizar los hijos de los infieles, contra la voluntad penitencia. Han sostenido, ó que no existe el pecado
de sus padres, á no ser que no se hallen en peligro de original en los niños, ó que no se borra por el sacra
muerte; no solo porque esta clase de violencia hecha mento; que la mancha de este pecado queda aun en el
á los padres y madres es contraria al derecho natu bautizado, y que este puede ser reprobado por el pe
ral que tienen sobre sus hijos, sino porque estos cuan cado original; han dicho que el bautismo no da la
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gracia santificante, no imprime en el alma del cris da la antigüedad eclesiástica, como no sea entre los
liano ningun carácter, por lo que nada impide el rei hereges. - - -

terarlo cuando parezca conveniente; han enseñado Los que han sostenido que el bautismo no impone a
que este sacramento, cuando mas, impone al cristiano cristiano otra obligacion mas que la de tener fé, no
la obligacion de creer, pero no la de observar los man han contrariado menos la doctrina de S. Pablo, pues
damientos de Dios y de la Iglesia; de lo que por úl— to que exige de los cristianos una fé que obra por la
timo se sigue que el bautismo no es muy util ni abso caridad, y no cesa de exhortarlos á que hagan bue
lutamente necesario, y que se puede descuidar sin nas obras. Galat. c. 5, y, 6: c. 6, y.9, etc. V. OBRAs,
correr ningun peligro su salvacion; asi los cuákeros JUSTIFICACION.
de Inglaterra se abstienen de dar y de recibir este sa V. De la necesidad del bautismo. Jesucristo institu
cramento, y un número bastante considerable de pro yó este sacramento como medio de salvacion absolu
testantes no se apresuran á dárselo á sus hijos. tamente necesario cuando dijo: «Si alguno no fuese
El concilio de Trento ha condenado todos estos er regenerado por el agua y por el Espíritu Santo, no
rores en las Sess, 5, 6 y 7; en las que ha establecido puede entrar en el reino de Dios.» Joan. c. 3, y. 5.
la creencia católica con respecto al pecado original, «Predicad el Evangelio á toda criatura; el que creyere
la justificacion, los efectos de los sacramentos y los y se bautizare se salvará; el que no creyere se con
del bautismo en particular, y no cuesta trabajo á los denará,» Marc., c. 16, y. 16. S. Pedro ha repetido
teólogos calólicos el demostrar que todas las conse esla misma verdad diciendo que el bautimo nos salva,
cuencias del sistema de los protestantes son espresa 1." Petr. c. 3, y.21, y S. Pablo nos enseña que Dios
mente contrarias á la Sagrada Escritura. Si los pre— nos ha salvado por el baño de regeneracion, y la re
tendidos reformadores hubiesen sido tan grandes teó novacion del Espíritu Santo. Tit. c. 3, y.5. No igno
logos como se les supone, las hubieran previsto, y es ramos los subterfugios con que los calvinistas y los
probable que hubiesen retrocedido á la vista del abis— socinianos han torcido el sentido de estos lugares
mo en que se iban á precipilar. de otros muchos que establecen el dogma; pero la
El mismo S. Juan Baulista dijo á los judios: «Yo os sia, condenando sus errores, ha lanzado el mismo ana
bautizo en el agua, pero el que vendrá despues de mí tema á las falsas interpretaciones que dieron á la Sa—
os bautizará en el Espíritu Santo y en el fuego.» grada Escritura. El concilio de Trento, despues de
Mat. c. 3, y. 11. S. Pablo hizo bautizar en nombre haber decidido que Adan ha trasmitido á todo el ge
de Jesucristo á los fieles que habian ya recibido el nero humano, no solo la necesidad de sufrir y de mo
bautismo de S. Juan. Act. c. 16, y.5, luego es falso rir, sino tambien el pecado que es la muerte del alma,
que estos dos bautismos tuviesen la misma virtud. En enseña que no puede borrarse sino por los méritos de
la palabra oRIGINAL, probaremos que todos los niños Jesucrisio que se nos aplican por el bautismo, ses. 5,
sin escepcion nacen manchados por el pecado, y que can. 2 y 3; que desde la promulgacion del Evangelio
este se borra enteramente por el bautismo: esta es la no puede pasar el hombre del estado de pecado al de
doctrina espresa de S. Pablo que dijo á los gálatas, gracia sin el bautismo, ó sin el deseo de recibirlo, se
c. 3, y . 17: «Todos los que habeis sido bautizados en sion 6, can. ; y consiguientemente anatematiza á
Jesucristo habeis sido revestidos de Jesucristo ;» y á cualquiera que sostenga que este sacramento no es ne
los Rom. c. 8, y. 1: «No hay ningun motivo de con cesario pará la salvacion, ses. 7, can. 5.
denacion en los que están en Jesucristo y no caminan Esta doctrina ya se sostuvo en el siglo V, contra
ya segun la carne.» A Ananias le dijo cuando se con los pelagianos. Pretendia Pelagio que el pecado de
virtio: «Recibid el bautismo y lavad vuestros pecados Adan no habia dañado sino á él solo, y no á sus des
despues de invocar el nombre de Jesucristo.» Act. c. cendientes: que el bautismo se daba á los niños, no
22, y . 16. S. Pedro escribió á los fieles. 1.º Petr. c. para borrar en ellos ningun pecado, sino para que re
3, y, 21: «El bautismo os salva, no purificándoos de cibiesen la gracia de adopcion, que aunque muriesen
las manchas de la carne, sino dándoos delante de sin haberle recibido, alcanzaban la vida elerna por el
Dios el testimonio de una buena conciencia por una mérito de su inocencia. S. Agustin combatió con to
resurreccion semejante á la de Jesucristo. ¿De qué nos das sus fuerzas estos errores; fueron condenados por
salva, sino del pecado y del castigo? S. Pedro no atri muchos pontífices y concilios del Africa, y esta sen
buye este efecto á la fé, sino al bautismo, aunque la tencia se confirmó en el concilio general de Efeso en
fé sea una disposicion necesaria. el año 31.
En el párrafo siguiente demostraremos por la Es— Calvino no fué menos temerario que Pelagio cuan
critura la necesidad absoluta de este sacramento y do enseñó que los hijos de los fieles se hallan santifi
la obligacion rigorosa impuesta á todo cristiano de cados desde el vientre de su madre; la creencia gene
recibirlo. S. Pablo habla del carácter que imprime, ral de los calvinistas es, que los hijos de los infieles que
diciendo á los de Efeso, c. 4, y . 30 : «No contristeis mueren sin bautismo se condenan; pero que no sucede
el Espíritu Santo de Dios en el que habeis sido seña lo mismo á los de los cristianos, porque tienen par
lados con un sello para el dia de la redencion.» Y es— te en la alianza que Dios hizo con los hombres por me
tas palabras son análogas á las que dijo de Abraham, dio de Jesucristo. En este supuesto, no vemos por qué
que recibió la circuncision como un sello de la justicia es todavia necesario bautizar á los hijos de los fieles.
que viene de la fé, Rom. c. , y. 11, y el sello ó el Es preciso observar que el concilio de Trento de
carácter de la circuncision era indeleble. Con este clara que el hombre no puede pasar del estado de pe
fundamento S. Agustin ha sostenido contra los dona cado al estado de gracia sin el bautismo ó sin el deseo
tistas que era un crímen el reiterar el bautismo, y no de recibirlo.
se puede citar ningun ejemplo de este atentado en to En efecto, siempre se ha creido en la Iglesia, que,
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la léunida al deseo de recibir el bautismo puede su- cho á la vida eterna; que no pueden purificarse de es
plir á este sacramento cuando hay imposibilidad de te pecado, sino por la aplicacion de los méritos de Je
recibirlo; nunca se ha dudado de la salvacion de los sucristo y por el hautismo, y si se mueren sin haberlo
catecúmenos que han muerto sin haber podido alcan recibido se condenan. De consiguiente desecharon el
zar esta graciá. Se ha pensado tambien ¿ el mar— lugar ó estado medio que Pelagio habia imaginado
tirio de los que morian por Jesucristo producia el mis entre el reino de Dios y la condenacion, estado que
mo efecto, y en esta creencia la Iglesia dá culto á los llamaba la vida eterna, y en el que colocaba á los ni
santos inocentes. Respetables obispos del siglo III han ños muertos sin bautismo. Despues de esta época, el
pensado tambien que los fieles, que habian recibi parecer general de los teólogos es que no solo estos
do un bautismo nulo entre los herejes, pero que ha niños están escluidos de la bienaventuranza eterna,
bian vuelto de buena fé á la Iglesia, y que habian sino que se hallan condenados á los tormentos del in
participado de los santos misterios, no tenian necesi fierno; que sin embargo los padecen en un grado mu—
dad absoluta de reiterarles el bautismo. Este era el cho menor que los demas réprobos.
parecer de S. Dionisio de Alejandría, de S.Cipriano, A pesar del número y de la autoridad de los que
Epist. 73, ad Jubaian. V. Eusebio Hist. eccles. lib. 7, sostienen este dictámen, Sto. Tomás, S. Buenaven
c. 9, y la nota de Lowth. Bingham orig. eccles. lib. 10 tura, el pontífice Inocencio III y otros teólogos esco
c. 2, S. 23. Por último, los Padres, á escepcion de San lásticos, muy instruidos de lo que se ha decidido con
Agustin, todos han sido de parecer que S. Juan Bau tra los pelagianos, han juzgado que verdadera -
tista ha sido santificado por Jesucristo en el vientre de mente es de fé, el que los niños que mueren sin
su madre, por esto celebra la Iglesia su natividad. En bautismo no pueden entrar en el reino de los cielos,
consecuencia, los teólogos distinguen tres especies de ni gozar de la vida eterna, y que asi esperimentan la
bautismo á saber: el deseo, baptismus flaminis, el pena que se llama de daño; pero que no es de fé que
de sangre ó el de martirio, baptismus sanguinis, y el sufran tambien la de sentido, ó los tormentos del in
bautismo de agua baptismus fluminis. fierno; esto es solamente una opinion teológica apo—
El pasage de S. Pablo de que abusan Calvino y sus yada en fuertes pruebas de que sin embargo es per
sectarios, no prueba lo que ellos quieren. El Apóstol mitido separarse. Algunos han avanzado hasta ¿r
dice, 1.º Cor. c. 7, y.1 : «Que un marido pagano que estos niños gozan de una felicidad natural, que les
es santificado por una muger cristiana, y que una es indemniza de la pérdida que han tenido de la eterna
posa pagana es santificada por un marido cristiano; de bienaventuranza adquirida por los méritos de Jesu
otro modo, añade, vuestros hijos serian impuros; asi cristo. Esta ha sido la opinión del cardenal Sfondrato
son santos.» Esto no prueba que estos niños nazcan en el libro titulado Nodus praedestinationis dissolu
esentos del pecado, sino generalmente un padre ó tus, cuya condenacion pidieron al soberano pontífice
una madre que profesa el cristianismo, procura bau muchos obispos de Francia en 1696.
tizará sus hijos, ó que hay motivo para esperar que Nadie se ha levantado con mas calor contra el mo
los educarán en esta religion. Véase la Synopsis de derado dictámen de los escolásticos, que los partida
los críticos sobre este lugar. rios de Jansenio. Como en el interés de su sistema es
VI. ¿Cuál es el destino de los niños que mueren sin taba el persuadir que aun un adulto puede ser culpa
bautismo? Parece que esta cuestion se halla ya resuel ble y digno de castigo por un delito que no era libre
ta suficientemente por lo que acabamos de decir con de evitar, han hecho todo lo posible para probar que
respecto á la necesidad absoluta de este sacramento la condenacion de los niños muertos sin bautismo, á
para alcanzar la salvacion, y por las razones de que los tormentos del infierno, es un artículo de fé y que
se valieron en el siglo V, para refutar los errores de no se puede sostener lo contrario sin ser herege. No
Pelagio. Al principio, este heresiarca no se atrevió á pretendemos favorecer su precaucion, refiriendo fiel
decidir nada en cuanto al destino de estos niños. Bienmente las pruebas que establecen el dictámen rigoro—
sé, decia, á donde no van, pero ignoro á donde van; so de los demas teólogos. La mayor parte han sido
Quo non cant, scio; quo eant, nescio. Despues, por no empleadas por S. Agustin contra los pelagianos, y su
contradecir espresamente las palabras de Jesucristo, autoridad les dá un nuevo peso. - -

Joan. c. 3, y.5, dijo: que á la verdad estos niños no 1." Las palabras de Jesucristo, Joan c. 3, y.5.
entraban en el reino de los cielos, pero que tampoco son claras. «Si alguno no estuviese regenerado por el
eran condenados al infierno, que tenian la vida eter agua y por el Espíritu Santo, no puede entrar en el
na por razon de su inocencia. S. Agustin, lib. 1, de reino de Dios.» El recurso que imaginó Pelagio de
Pecc. meritis, et remiss. c. 28 , n. 54; serm. 29, distinguir el reino de Dios de la vida eterna era ab
c. 1, n. 2; Epist. 156, etc. Imaginó un lugar ó un es surdo, porque estas dos palabras, en la Sagrada Es
tado medio entre la gloria del cielo y la condenacion, critura, designan igualmente la eterna bienavenlu
en el que colocaba á estos niños; de lo que resultaba ranza. Los socinianos y los protestantes no salen
que se habian salvado del infierno, sin haber partici mejor diciendo que en otros muchos lugares el reino
pado en nada de los méritos ni de la redencion de Je de Dios, el reino de los cielos significan el reinado de
sucristo. Jesucristo sobre su Iglesia; no es asi como se enten
S. Agustin y demas defensores de la fé católica re dian en tiempo de Pelagio, ni antes que él: los Pa
futaron todas estas vanas opiniones, y probaron por la dres han dado constantemente el mismo sentido á
Sagrada Escritura, por la tradicion de los cuatro pri estas palabras que el que ha seguido el concilio
meros siglos, por los exorcismos del bautismo, que de Trento, entendiendo por él la bienaventuranza
todos los hijos de Ádan nacen manchados por el peca eterna.
do original, y en consecuencia privados de todo dere 2." S. Pablo, Efes. c. 2, y . 3, dice: éramos por
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naturaleza hijos de ira 1; luego dice S. Agustin, éra bautismo. Luego la muerte del alma y la cautivi
mos hijos de venganza y de castigo, masa de perdi dad bajo el poder del demonio, llevan consigo la con
cion y de condenacion por el pecado original; Rom. denacion como una consecuencia necesaria y no hay
c. 5, y. 18: dice el Apóstol que el pecado de uno solo otro medio que el bautismo por el que los méritos de
sirvió para la condenacion de todos; asi como la jus Jesucristo puedan aplicarse los niños.
ticia de uno solo, sirve para la justificacion de to No se puede negar que estos argumentos son muy
dos. Si no se habla alli de la condenacion del infier fuertes; prueban invenciblemente que los niños que
no, no se podrá decir ya, como lo dice la Sagrada mueren sin bautismo están escluidos de la bienaven
Escritura, que Jesucristo nos libertó del infierno, del turanza eterna, y sufren la pena de daño; pero no de
poder de las tinieblas, de la potestad del demonio, etc.; muestran tan ciertamente que estos niños padezcan
es necesario tomar la palabra redencion en un senti tambien la pena de sentido. Queriendo estrechar de
do metafórico como los socinianos despues de los pe masiado estos razonamientos se espone á inconvenien
lagianos. les enojosos, y pudieran oponerse otros que no pa—
3.° El mismo Apóstol dice como S. Pedro que el recerian menos concluyentes. No hay pues necesidad
bautismo nos salva. ¿De qué nos salva sino del in en esta cuestion de seguir el partido mas riguroso,
fierno y de los tormentos eternos? Luego el que no asi la facultad de teología de Paris, en la censura de
hava recibido este sacramento no se salva. Emilio prop. 2% y sig. edic. en 12, pag. 90, ha he
..º Jesucristo, hablando del juicio final, no hace cho observar que la Iglesia católica deja la libertad
mencion mas que de dos lugares; á saber el de la de pensar con Santo Tomás, que no se está sujeto á
derecha donde están los justos que son enviados á la la pena de sentido por el solo pecado original , sino
vida eterna, y el de la izquierda donde están los malos, que solamente está privado de la vision intuititiva de
condenados al fuego eterno. Mat. c. 25, y.33. Los ni Dios, que es un don gratuito sobrenatural al que las
ños que mueren sin bautismo no pueden estar colocados criaturas inteligentes no tienen por su naturaleza nin
en la derecha, luego estarán á la izquierda, y sufri gun derecho.
rán la suerte de los réprobos: en esto no se da medio. * En cuanto al dogma del pecado original, dice
5." Los concilios del Africa, los pontífices Ino el autor de la Fé justificada de toda nota de contra
cencio 1, Zosimo, Celestino I, Sisto III, S. Leon y diccion con la razon, pag. 60, no hay ni injusticia ni
Gelasio, que condenaron á los Pelagianos, el concilio falta de bondad de parte de Dios en negará la des
general de Efeso que confirinó esta sentencia están cendencia de un padre culpable privilegios puramen
reputados como aprobadores de la doctrina de San le gratuitos, que no eran debidos ni al padre ni á los
Agustin, y este santo doctor enseñó siempre que los hijos, y que no estaban asegurados ni al uno ni á los
niños que mueren sin bautismo se condenan. otros sino con la condicion de una fiel obediencia á la
6.º. Tambien ha sido esta la opinion de lodos los ley del Criador. Un súbdito colmado de gracias y de
Padres latinos de los siglos siguientes: y de los teólo— favores por su príncipe, se rebela contra él y por es
gos hasta la aparicion de los escolásticos. En el se—
to, el príncipe le retira á él y á su descendencia pri
vilegios que no debian ser hereditarios sino bajo jus—
gundo concilio de Leon, que es el catorce general, ce
lebrado en el año 127', está decidido terminantemen las condiciones, las que no se han enado, y á las que
te que las almas de los que mueren en pecado mor aun se ha altado espresamente. ¿En esto hay alguna
tal, ó con solo el pecado original, bajan al punto al injusticia ó falta de bondad? Hé aquí verdaderamen—
infierno para sufrir en él penas desiguales ó diferen te á lo que se reducen las consecuencias del pecado
tes. Esta misma decision se halla sin embargo repeti original. -

da literalmente en el concilio de Florencia, celebra— Añadamos á esto que S Agustin ha esperimentado

do en el año 139, can. '. Esto es una condenacion
espresa de la opinion de los escolásticos.
7." El concilio de Trento, ses. 5, en su decreto
sobre el pecado original declara, can. 1.”, que Adan
por su pecado no solamente perdió la santidad y la
justicia original, sino que incurrió en la ira é indig
nacion de Dios, en la muerte y en la cautividad bajo
la potestad del demonio, can. 2."; que transmitió á
todo el genero humano no solo la muerte y las penas
corporales sino el pecado que es la muerte del alma;
can. 3; que este pecado no puede quitarse, sino por
los méritos de Jesucristo que se nos aplican por el
(1) y. 1, 2, 3. «Et vos, cum essetis mortui delictis et peccatis
vestris, in qulbus aliquando ambulastis secundum seculum mun
di hujus, secundum principem potestatis aeris hujus espiritús, qui
nunc operatur in filios difidentias. In quibus et nos omnes ali
quando conversati sumus, in desideriis carnis nostrae facientes
voluntatem carnis et cogitationum, et eramus naturá filii irae».
Este contesto parece que favorece a los intérpretes que piensan
que en este lugar se trata dc los adultos; y que el Apósto tiene
presente sobre todo los pecados actuales. Por o demás la opinion
de los doctores que no admiten otra pena eterna para el pecado
original que la privacion del reino de los ciº los , puede entera
mente conciliarse con las palabras de S. Pablo. Reconocen tam
bien que el hombre al nacer es hijo de ira, y por esto se halla es
cluido de la vision intuitiva si no es regenerado por el bautismo.
el mismo embarazo que nosotros en cuanto al destino
de los niños sinpoderse satisfacer ásí mismo. Despues
de haber enseñado en un sermon que los niños muer
tos sin bautismo están condenados á las penas del in—
fierno y al fuego eterno, ha mitigado singularmente
su doctrina en cuanto al destino de estos niños. Epis
tola 28 ad Hieron, y si no se atreve á eximirlos de to
da pena, no los sujela sino á la mas leve de todas;
tampoco se aventura á decidir cuál será la naturale
za de esta pena, ni cuál su carácter y estension, li
bro 5, contra Jul. c. 2, l. 6, c. 5. No se atreve á asegu
rar que será peor que el aniquilamiento, y que hubiera
sido mejor para estos niños no haber existido jamás.
Ibid. Asialgunosteólogos piensan, y Gonel entre ellos,
(1) Hé aqui sus palabras: «Ego autem non dico párvulos, sine
Christi baptísmate morientes tanta poena es se plectendos, ut cis
non na ci potius expediret: cum , hoc Dominus rion de quibuslibet
pe catoribus, sed de seelestissimis et impiis dixerit. Si enim quodl
le Sodomis ait , et utique non de solis intelligi voluit, alius alio
tolerabilius in die judicii puniretur; quis dubitaverit párvulos
non baptizatos, qui solum habent originale per catum , nec ullis
propriis aggravatitur, in damnatione omnium levissima futuros?
Quae qualis el quanta erit, quam vis definire non possin, non
tamen audeo dicere, quod eis ut nulli essent, quam utibi essent,
potius expediret»".
T()M10 I. 35
 BAU 230 BAU
que la privacion de la vision beatífica no causará do— «No se vió en la aurora de la religion que los após
lor alguno ni tristeza á estos niños desgraciados. Este »tóles solo atendian á la necesidad de cada fiel para
estado será en alguna manera un estado medio entre » distribuir el dinero que se ponia ante sus pies? Y no
la recompensa y el castigo, lo que no parecia impo— » hemos de ver nunca renacer aquellos tiempos feli
sible al mismo S. Agustin. De lib. arb l. 3, c. 23.1 »ces? Y tú, infortunado rebaño de Jesucristo, has de
Gonel se apoya en la autoridad de S. Gregorio Na— »gemir siempre en la opresion, bajo los poderes ecle
cianceno º de S. Gregorio Niseno 5 y de S. Ambro »siásticos?.... El Todopoderoso espera de los pueblos
sio. Santo Tomás, in 2." dist. 33, q. 2. art. 2, pare »que destruyan la liranía de los magistrados, que re
ce indicar este modo de pensar, y admitir un orden »conquisten su libertad con las armas en la mano,
de providencia bienhechora de parte de Dios para con »que rehusen el pago de los tributos, y establezcan la
aquellos á quienes no puede recompensar 4. Si pa— »comunidad de bienes. Deben traerse á mis pies, co
rece mal que algunos teólogos califiquen con dema »mo en otro tiempo se los hacinaba á los pies de los
siado rigor los senlimientos rígidos de la escuela, aun »apóstoles. Sí, hermanos mios, el espíritu del cris—
cuando se parezcan bastante en la espresion á los er— » tianismo es no tener nada como propio; y rehusar
rores condenados, no se deberia tener el mismo mira »á los príncipes el pago de los impuestos con que nos
miento con opiniones mas suaves sostenidas por teó— »abruman, es pues, salir de la esclavitud de que Je
logos respetables, y que son muy á propósito para »sucristo nos ha libertado.» (Catrou, Hist. des Anab.
detener á los incrédulos que se ¿ de la Sleidan, l. X). -

pretendida dureza del parecer contrario? No se dehe En todas las épocas en que se ha querido minar el
sin embargo dar á estas opiniones mas valor que el de poder, se ha recurrido á las pasiones del pueblo; las
tener partidarios ¿ , y contentarse con pro palabras de Muncero son el tema de todos los ambi
har con esto que el parecer contrario no forma parte ciosos, de todos los hereges y novadores. Qué efecto
del dogma establecido muy independiente de estas pues no produjeron estas arengas? La ciudad de Muhl
discusiones de escuela. Véanse las conferencias de An hausen se rebeló, arrojó á los magistrados y procla
gers sobre los pecados, 2.” quest. art. 3. mó al profeta juez en Israel. Entonces escribió á los
soberanos que la aurora de la libertad iba á levantar
Bautistas, V. ANABAPTISTAs. se en el mundo, y que Dios le mandaba esterminar
cs S" En su lugar respectivo han sido considera los tiranos. Eficazinente secundado por sus discípu
dos los anabaptistas tajo el aspecto religioso: hé aqui los, se vió muy pronto al frente de 40,000 hombres.
una idea de su espiritu político.—No duró largo tiem Los príncipes confederados marcharon contra la le
p0 la buena armonía entre los anabaptistas y refor— gion fulminante; y los dos ejércitos se vieron cara á
madores. Muncero recorrió la Suebia, la Turingia y cara. Entonces Muncero arengó á sus soldados, dicién
la Franconia, predicando lo mismo contra el papa doles: «Todo debe ceder al mandamiento del Eterno
que contra Lutero. La voz del doctor sajon habia en » que me ha puesto á vuestra cabeza. En vano reso
cendido la guerra civil en Alemania; sacudiendo todo »nará contra nosotros la artillería del enemigo; yo
yugo y autoridad, se habian sublevado provincias » recibiré todas las balas en la manga de mi vestido,
enteras contra sus señores; y las voces de tiranía, » y ella sola será una fortaleza impenetrable al ene—
libertad, habian inflamado los ánimos. En aquellas » migo.» En despecho del hombre de Dios perecieron
circunstancias dijo Muncero á los pueblos: «Todos en esta jornada mas de 7,000 anabaptistas; fueron
»somos hermanos, todos somos hijos de un padre co— completamente derrotados. Huyó el mismo general
» mun. De dónde pues proviene la pobreza y la rique Muncero; fué preso y ejeculado en Muhlhausen
»za? Por qué hemos de gemir en la indigencia? Por en 1525.
»qué hemos de estar abrumados por el peso de los Juan de Leyden tuvo un fin igualmente trágico.
»males, mientras los grandes del mundo nadan en las Habíase establecido en Munster el anabaptismo y he
» delicias? Dadnos, ricos del siglo, avaros usurpado cho alli grandes progresos. Juan Mateo, panadero de
» res; volvednos los bienes que reteneis injustamente: Harlem, impuso las manos á los prosélitos, y los envió
»son para dividirlos entre todos; y no es solo en el en clase de apóstoles. Por todas partes anunciaban
» concepto de hombres como tenemos derecho á igual que habia llegado á Munster un profeta suscitado por
» distribucion en las ventajas de la fortuna, es tam Dios, que predecia cosas maravillosas y enseñaba á
»bien bajo el de cristianos. los hombres el camino del cielo. Una multitud de fa
(1) , Non enim metuendum est, ne vita esse potuerit media náticos fueron á ver al hombre de Dios, asolándolo
nedam inter¿
«l 11 eSSºn On
reeteinter
factum et peccatum,
praemium et setentia judicis me
atque supplicium»º. todo á su tránsito.
2. Este Padre exime á los niños que mueren sin bautismo Entonces Juan de Leyden corrió desnudo por las
de dolor y de tristeza, orat. 40. «Nec coelestigloria, nec su pli calles, gritando: Que viene el rey de Sion!.... Es ri
ciis a justo judice aficientur; utpote qui licet non signat non
fuerint, improbitate tamen careant..... eque quis honore indig
nus est, statim etiam poenam promereturȼ.
bió en seguida diciendo que Dios le habia alado la
(3) , Orat. de infantibus. «Immatura mors infantium , neqne in lengua por tres dias. Cuando hubo pasado este tiem
doloribus ac morestitia esse eum quisic vivere desiit, inteligen po declaró, con un tono profético, que el Señor, le
dum esse suggerite".
(4l «Ninil omnino dolebunt de carentia visionis intuitivae ; imó mandaba establecer doce jueces sobre Israel. Creyén
magis gaudebunt de hoc quod participabunt multum de divina dose bien afianzado en el espíritu del pueblo, mandó
bonitate et perferio, ibus natura libus». S. Buenaventura por su decir á los jueces por un profeta; «Hé aqui lo que
parte dijo: «Ad illud quol párvuli multas poenalitates sustinent anuncia el Señor Dios, el Eterno: Como en otro tiem
in hac yità, dicendum quod etsi temporaliter punire pro peccato
ºriginalisi justum, noñ tamen sequitur quo eternalter. po establecí á Saul rey de Israel, y despues de él á Da
liocencio III. estableció espresamente esta distincion: . Poena
originalis peccati est carentia visionis Dei; actualis vero peccati vid, aunque mo fuese mas que un simple pastor, asi
es gehennae perpetuae cruciatus. Ex cap.Majores de baptismo, ". tambien establezco en el dia á Bécold (es el verdadero
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nombre de Juan de Leyden) mi profeta , rey en Sion». confirmacion y la eucaristia, inmediatamente despues
Bien pronto apareció un nuevo Samuel, y presentan del bautismo. Asi el bautisterio de la Iglesia de Santa
do á Juan una espada, le dijo: Dios te estableció rey, no Sofia, en Constantinopla, era tan espacioso que sirvió
solamente sobre Sion, sino sobre toda la tierra. El de asilo al emperador Basilisco, y de sala de reu
nuevo David hizo famoso su reinado por infamias y nion á un concilio muy numeroso.
atrocidades increibles; fueron asesinados los católicos Los bautisterios tenian muchos nombresdiferentes,
y padecieron tormentos refinados. Todavia estan col tales como piscina, lugar de iluminacion, etc; todos
¿ de la torre de la catedral de Munster las jaulas relativos á las diferentes gracias que se recibian en
ellos por el sacramento.
e hierro en que eran quemados á fuego lento.
La intolerancia, el espíritu de barbárie y de cruel En los autores antiguos se dice poco en cuanto á la
dad fueron en todo tiempo los caracteres distintivos forma y adornos de los bautisterios, ó al menos lo que
de los novadores. Lutero, Melanchthon, Bugenhagen de ellos se dice es muy incierto. He aqui lo que dice
y Regio, con los teólogos de Ulm y de Tubinga, de Fleuri sobre la fé de Anastasio, de Gregorio de Tours
cidieron que podian ser castigados de muerte los ana de Durando en sus notas sobre el pontificado atri
baptistas en el concepto de hereges, tres de ellos, uido al papa Dámaso: «El bautisterio regularmente
Muller, Kraut y Peisker fueron decapitados en Jena era redondo, teniendo un hoyo al que se bajaba por
por cooperacion de Melanchthon. algunas escaleras para entrar en el agua; propiamen
Asi acreditaba la reforma su espíritu de libertad, te era un baño, Luego estaba limitado á una gran
de tolerancia, de emancipacion y filantropía Véase la cuba de marmol, ó de pórfido como una bañera, por
Simbólica de MoeiILEB, t. 2, c.1. Primer periodo de los último se reducia á una pila como son en el dia las fuen
anabaptistas. tes. Estaba adornado el bautisterio de pinturas análo
gas al sacramento, y alhajado con muchos vasos de
Bautisterio ó Baptisterio, es el lugar , ó oro y de plata, para guardar los santos óleos y verter
el edificio donde se conserva el agua para bautizar. el agua. Muchas veces estos vasos tenian la figura de
Los primeros cristianos, segun S. Justino martir corderos ó ciervos para representar el Cordero cuya
y Tertuliano, no tenian mas bautisterios que las fuen sangre nos purifica, y para manifestar el deseo de las
ies, los rios, los lagos, ó la mar, que estuviesen mas almas que buscan á Dios, como el ciervo sedientobus
cerca de su habitacion, y como muchas veces la per ca la fuente, segun la espresion del Ps. 1. Se veía
secucion no les permitia bautizar en medio del dia, tambien en el bautisterio la imagen de S. Juan Bau
acudian de noche, ó conferian el bautismo en sus tista y una paloma de oro ó de plata colgada, para
CaSaS. representar mejor toda la historia del bautismo de
Luego que la religion cristiana llegó á ser la reli Jesucristo y la virtud del Espíritu Santo, que desciende
gion de los emperadores, ademas de las iglesias, se sobre el agua bautismal. Aun algunos decian el jor—
construyeron edificios particulares, destinados única dan en lugar de las fuentes». Costumbres de los cristia
mente á la administracion del hautismo, y por es— nos tit. 36. Lo que añade Durando, que los ricos or—
to se les llamó bautisterios. Pretenden algunos auto namentos con que el emperador Constantino habia
res que estos bautisterios estaban colocados antigua adornado el bautisterio de la iglesia de Roma, eran
mente en el vestíbulo interior de las iglesias, como lo como un recuerdo de la gracia que habia recibido de
estan ahora nuestras plas bautismales, pero esto es manos del papa S. Silvestre, es evidentemente falso,
un error. Los bautisterios eran edificios enteramente ¿ en el dia está demostrado que este príncipe se
separados de las basílicas, y situados áalguna distan.- autizó en Nicomedia, poco tiempo antes de su
cia de los muros esteriores de estas. No dejan ningu muerte.
na duda los testimonios de S. Paulino, de S. Cirilo de En el principio no hubo bautisterios, sino en las
Jerusalen y de S. Agustin. Separados asi los bautis ciudades episcopales, de donde procede que aun hoy
terios han subsistido hasta fines del siglo VI, aunque el rito ambrosiano no permite que se haga la bendi
desde entonces haya habido algunos colocados en el cion de las pilas bautismales la víspera de Pascua y
vestíbulo interior de la Iglesia, tal como en el que de Pentecostés en otra parte que en la iglesia metro
Clodoveo recibió el bautismo de manos de S. Remi politana, de las que las iglesias parroquiales llevaban
gio. Despues, este uso se hizo general, si se esceptuan el agua bendita para mezclarla con otra; despues se
un pequeño número de iglesias que han conservado el les ha concedido tener bautisterios ópilas particulares.
antiguo , como la de Florencia y todas las ciudades En la iglesia de Meaux, los curas de la ciudad, llevan
episcopales de Toscana, la Metrópoli de Rávena, y la á bautizar los niños á las pilas de la iglesia catedral,
iglesia de S. Juan de Letran en Roma. desde el sábado santo, hasta el sábado siguiente. Es
La mayor parte de estos edificios eran de una capa un derecho unido á la parroquia titular y á algunas
cidad considerable, en razon de que por la disciplina agregadas, pero no á todas, ni á las capillas y mo
de los primeros siglos no se administraba entonces mas nasterios, que si lo tienen, no lo poseen sino por pri
que por inmersion, y (fuera del caso de necesidad) vilegio concesion de los obispos.
solamente en las dos festividades mas solemnes del En el dia se confunde el bautisterio con las pilas
año, la Pascua, y Pentecostes. El numeroso concur bautismales. Antiguamente se distinguian esactamen
so de los que se presentaban á recibir el bautismo, y te estas dos cosas, como el todo y la parte. Por bau
la decencia que ecsigia el que los hombres se bauti tisterio se entendia todo el edificio en que se admi
zasen separados de las mugeres, requerian un local nistraba el bautismo, y las pilas no eran otra cosa que
tanto mas espacioso, cuanto que era necesario dispo la fuente ó el receptáculo que contenia las aguas de
ner alli los altares, en ¿ neófitos recibiesen la
que se hacia uso para el bautismo. Véase el antiguo
 BA Y 232) BEC

sacramentario, 2.” parte, pag. 55. Hemos hablado de He ahí tus dioses, Israel, los que le han sacado del pais
la bendicion de las pilas bautismales en el artículo de Egipto, c. 32, y. .
BAUTismo. No es de admirar que Moisés indignado de esta pre
varicacion rompiese las tablas de la ley, derribase y re
Isayanismo. V. Baianismo. dujese á polvo este ídolo, le arrojase en el torrente
cuyas aguas bebia el pueblo, y armase loslevitas man
EBeatas. V. RELIGIosAs. dándoles matar á los mas culpables; Este ejemplo de
severidad era necesario para intimidar á los demas y
seatificaclon. Acto por el cual el soberano para prevenir las recaidas. No fueron menos insensa
¿ declara respecto de una persona cuya vida ios sus descendientes cerca de quinientos años despues,
a sido santa y acompañada de algunos milagros, etc, puesto que adoraron los becerros de oro que Jeroboan
que se puede creer que su alma goza de la bienaven mandó construir para apartará sus súbditos de tribu
turanza, y en consecuencia de esto, permite á los fie lar culto al verdadero Dios en el templo de Jerusalen.
les darle un culto religioso. III. Reg. Cap. 12, y. 28. -

La beatificacion se diferencia de la canonizacion en El incrédulo mas célebre de nuestro siglo ha inten

que en la primera el pontífice no obra como juez de tado probar que la historia de la adoracion del becerro
terminandoelestado del beatificado, sino que solo con de oro no es verosimil mi posible; pero segun su cos
cede á determinadas personas, como á una Orden reli tumbre ha falsificado muchas circunstancias; asi se le
giosa, óá una comunidadel privilegio de rendir al bea ha demostrado que en sus reflecsiones hay tantas fal
tificado un culto particular, que no se puede reputar sedades y errores como palabras. Refutacion de la Bi
supersticioso, desde que lo autoriza el pontífice, en vez blia esplicada, l. 6, c. 6, art. 7. Cartas de algunos ju—
de que en la segunda el papa habla como juez y de— dios, primera parte, carta 5, etc. - -

lermina ear cáthedra el estado del nuevo santo. opone 1.° Que fue imposible á los israelitas en el
La ceremonia de la beatificacion se introdujo por desierto mandar hacer un becerro de oro. No es crei
creerse conveniente permitir á una Orden ó comu ble dice, que tuviesen fundidores de oro que soloseen
nidad tributar un culto particular á un sugeto pro— cuentran en las grandes poblaciones; es imposible
puesto para ser canonizado, antes de tener un pleno echar en fundicion un becerro de oro y construirlo en
conocimiento de los hechos, y por la mucha duracion una noche; se habrian necesitado lo menos tres me—
de los procedimientos que se observan en la canoni ses para acabar esta obra.
Si este crítico hubiera leido con mas reflecsion la
zacion V. CANONIzAcioN.
historia que impugna, habria visto que cerca de un
Becerro. Esta palabra se usa en la Escritura en año despues de la adoracion del becerro de oro, se ha—
diferentes sentidos: 1.º significa enemigos furiosos, llaron en el desierto y entre los israelitas dos fundi
Ps. 21. y, 13: Circumdederunt me vituli multi. 2.º dores capaces de hacer de oro, de plata, y de bronce
Al contrario, en Isaias c. 11, y, 7, denota nombres los adornos y los vasos del labernáculo. Erod. c. 31.
suaves y apacibles; se dice en él, que el oso y el becerro Sin duda aprendieron este arte en Egipto, donde en
pacerán juntos; es decir, que los débiles y los senci tonces ya era conocido y practicado. -

los no tendrán miedo á los que les parecen tenibles. Es facil convencerse, por el testimonio de los artis
3." El profeta Malaquias cap., y. 21, compara á un tas, que bastan dos ó tres dias para hacer un molde y
pueblo que está alegre con los becerros que riscan en poner en fundicion cualquiera obra, especialmente si
un prado. ..” enel Ps. 50. y, 21. esta palabra espre no es de gran peso y no ecsige mucha perfeccion. La
salas diferentes clases de víctimas, imponent super historia no dice que el becerro de oro se hiciese en una
altare tuum vitulos. Pero en Oseas cap. 4, y.3. viiu noche, ni que el cinceló el burillo perfeccionasen; al
los labiorum, las víctimas de los labios ó de la boca sig contrario, segun ella quedó tal como salió del molde,
nifican las alabanzas, los votos, las acciones degracias; c. 32, y 2. Los israelitas querian un ídolo que pu
á eslo es á lo que S. Pedro llama spirituales hostias. diesen trasladar con facilidad, y es sabido que aun hoy
S. Pedro c. 2, y.5. las naciones idólatras se contentan con figuras muy
toscamente trabajadas.
BECERRO DE ORO. Idolo que fabricaron los israe 2.º. Es inconcebible, dice nuestro filósofo, que tres
lilas al pie del monte Sinaí, a que dieron un culto se millones de judios que acababan de ver y de oir al
mejante al que habian visto rendir en Egipto al buey mismo Dios al estruendo de lastrompetas y de los true
nos, quisiesentan pronto
Apis; su historia está referida en el Ecodo., c. 32; y en su misma presencia,
demuestra la grosería de este pueblo, y su decidida apartarse de su servicio para adorar un becerro.
Respuesta. Todavia es mas inconcebible ver á los
tendencia á la idolatría. Cuarenta dias antes, los mis
mos israelitas se llenaron deespanto ála vista del apa antiguos paganos, y aun á los filósofos, obstinarse en
rato terrible con que Dios les intimó sus leyes, c. 19; la idolatría, apesar del espectáculo del universo que
les habia prohibido severamente adorará otros dioses les anunciaba un solo Dios, y á pesar de las lecciones
mas que á él, c. 20, y. 3. Prometieron serle obe— de los doctores, cristianos que les probaban esta ver
dientes y fieles, y le inmolaron víctimas, c. 2, y. 3 dad; ver todavia ateos que llevan su ceguedad y
y 5; porque Moisés tardaba mas tiempo del qué les obslinacion aun maslejos; ver en fin hombres, que pa
parecia en bajar del monte donde Dios le daba sus ór recen razonables, que despues de haber hecho los mas
denes, quisieron tener un dios visible, un ídolo á quien bellos propósitos en una grande enfermedad, vuelven
ofrecer sus sacrificios. En la fiesta insensata que cele— á los mismos desórdenes que necesariamente los ha—
braron en su honor, llevaron la impiedad hasta decir bian conducido á los bordes del sepulcro, y sin embar
 BEC 233) BEE
go desgraciadamente son bien ciertas estas contradic midades que los aquejan entra al menos una onza
ciones del entendimiento y del corazon humano. de la prevaricacion del becerro de oro; pero olvidan
3.° No se puede, continúa nuestro crítico, reducir que mil quinientos años despues sus padres se hi
el oro á polvo echándolo en el fuego; de ningun modo cieron culpables de un crímen mucho mayor, y
se puede disolver mas que por los procedimientos de mas digno de la venganza divina, dando muerte
la química de que seguramente Moises no tenia nin al Mesías. V. JUDios. S. 6.
gun conocimiento.
Respuesta. Aun cuando fuera necesario atribuir Beda, monge y sacerdote inglés, que murió el
á Moises conocimientos superiores en química, no va año 735, y fué la admiracion de su siglo por su
cilaríamos en ello, porque se ha dicho que este legis— ciencia y su piedad. Escribió la historia eclesiás—
lador se instruyó en las artes y en las ciencias de los tica de Inglaterra, comentarios sobre la Sagrada
egipcios; ahora bien, es incontestable que la de que Escritura, sermones y otras obras. Se resienten de
hablamos no les era desconocida. Mas no necesitamos la decadencia de la literatura en el siglo VIII;
suponer nada por conjeturas como á cada momento pero este venerable autor es un testigo nada sos—
sucede al censor de la historia sagrada. Esta solo dice, pechoso de la doctrina entonces creida y profesada
que Moises despues de haber arrojado al fuego el be en la Iglesia: hasta los escritores protestantes le han
cerro de oro, lo hizo romper y moler hasta pulverizar hecho justicia. Vidas de los PP. y de los Mártires,
lo, y despues mandó hechar este polvo en el agua 27 de mayo.
que bebian los israelitas. c. 32, y . 20. o SS" «En vano se buscarian en sus libros, dice
...º Dice en fin, que Moises á la cabeza de la tribu un crítico, los adornos de la retórica; pero sí hay en
de Leví mató veinte y tres mil hombres de su nacion, ellos mucha precision y claridad, una amable sen
que se supone estaban bien armados, puesto que aca cillez, un tono de franqueza, de piedad y de celo que
baban de combatir contra los amalecitas; jamás un interesan al lector. El candor y el amor de la verdad
pueblo entero se ha dejado degollar de esta manera caracterizan sus libros históricos; y si se dice que al
sin defenderse. Ademas, añade, que si este hecho gunas veces ha sido demasiado crédulo, al menos es
fuese cierto, habria sido un rasgo de crueldad inaudita preciso convenir en que ninguna persona juiciosa pon
de parte de Moises. drá jamas en duda su sinceridad. Se contenta en sus
Respuesta. Confesamos que la Vulgata cuenta comentarios frecuentemente con abreviar, ó poner en
veinte y tres mil; pero es indudable que esta version órden metódico los de S. Agustin, de S. Ambrosio,
no es esacta, porque el testo hebreo y el samarita de S. Gerónimo, de S. Basilio, &c. No lo ha hecho
no, los Setenta, la paráfrasis caldea, las traducciones por evitarse el trabajo, ni por falta de ingenio, como
de Aquila, de Symmaeo, de Theodocion, las versio han dicho algunos modernos. Su objeto era unirse
nes Siriaca y Arabe solo ponen cerca de tres mil mas estrechamente á la tradicion, interpretando los
hombres. Los padres como Tertuliano, San Ambro— libros santos. En lo que dejaron por hacer los Padres,
sio, Optato, San Isidoro de Sevilla, San Gerónimo y siempre sigue los principios de estos, por miedo á
otros leyeron este último número en la antigua Vul desviarse de la tradicion en lo mas mínimo. Convie
gata latina; prueba clara de que la palabra veinte y nen los jueces mas competentes en que los trozos que
tres es un error cometido por el copista en los siglos son enteramente suyos, no ceden en solidez y en jui
posteriores. Además que es muy ridículo suponer cio á los mas hábiles de los Padres.»
bien armados á hombres que se entregaban á los fes
tines y al desorden; la historia dice terminantemen . Beel regor, Dios de los moabitas y de los ma
te que estos idólatras se habian despojado de sus dianitas. Cotejando con el testo sagrado las conjetu—
vestidos. Earod. c. 32, y. 25. ras de los antiguos y de los modernos, parece que es
Por lo demas, sostenemos que en esta ejecucion ta divinidad era casi lo mismo que el Priapo de
no hubo injusticia ni crueldad. Dios por su ley habia los latinos, dios de la lujuria, á quien representa—
prohibido la idolatría bajo pena de muerte, y los ban bajo una figura muy obscena. Se dice, en el li
israelitas se sometieron á ella; solo podian subsistir bro de los Números, c. 25, que las hijas de los moa
en el desierto por una providencia sobrenatural, y bitas convidaron á los israelitas á sus sacrificios, que
Dios solo se la prometió bajo la condicion de obede concurrieron á ellos, que adoraron á los dioses de
cerle; desde el momento que se rebelaron contra la estas hijas, se iniciaron en el culto de Beelfegor, y
ley, Dios podia hacerlos perecer á todos, abando - se entregaron á la disolucion con ellas. Dios, irrita
nándolos, y asi les amenazó. Ibid. }. 10. Moises do por este crímen, mandó áMoisés que hiciese ahor
estaba pues obligado á hacer un ejemplar en los cará los principales del pueblo. Moisés mandó á los
mas culpables para intimidar á, los otros, obtener jueces que condenaran á muerte á los que fuesen reos
su perdón y salvar de este modo su nacion. ¿Qué de idolatría. Finées, nieto de Aaron, mató públi
hay que censurar en esta conducta? camente á un israelita con una prostituta, madiani
Otros críticos antiguos y modernos han dicho que ta; perecieron veinte y cuatro mil hombres en esta
Aaron fué el mas culpable de todos, y sin em ocasion. Dios mandó tambien á Moisés que tratase
bago fué perdonado, mientras que tres mil hom á los madianitas como enemigos declarados, y los
bres sufrieron el castigo de su delito. Ya hemos re esterminase. Esta órden se ejecutó poco tiempo des
futado esta calumnia en la palabra AARON. Ho pues. Núm. c. 31. :

los judios están tan persuadidos de la enormida Este ejemplo de severidad no tiene perdon á los
del crímen de sus padres, que creen que Dios toda ojos de los incrédulos: acusan á Moisés de crueldad,
via lo está vengando; dicen que en todas las cala de ingratitud con los madianitas, entre los que ha
 BE. 23%) BEG
bia, encontrado un asilo y tomado una esposa, y de Así los griegos adoraron á Hércules, MUYAIRos y k0No
barbárie tratando su paisá fuego y sangre. teyos Hércules que destruye las moscas y las langos
Fácilmente justificará al legislador de los hebreos tas. Apolo smYNrzEUs que mata los ratones, &c. Véase
el que quiera reflecsionar un poco. 1.° Entre los ju— á Plinio l. 10, c. 28; y l. 29, c. 6. Ocozias, rey de
dios, en virtud de la ley que Dios les habia dado, Israel, estando enfermó envió á consultar á Beelzebub,
la idolatría era un crímen de lesa magestad divina, y Dios le castigó con la muerte. ...” Reg., c. 1.
atendida á la inclinacion invencible de los israeli Se dice en el evangelio, que los judios acusaron
las á imitar á sus vecinos, y á los desórdenes de á Jesucristo de lanzar los demonios por el poder de
que la idolatría iba siempre acompañada, no habia Beelzebub, príncipe de ellos. Mat. c. 12. y. 2.
mas medio para prevenirla y estirparla que casti El s¿ les hizo conocer fácilmente que no po
gar con la muerte á todos los culpables. 2." Las tri dia tener relaciones con el enemigo de la salvacion;
bus de madianitas vecinas de los moabitas no eran que al contrario habia venido para vencerle y para
las mismas que estaban prócsimas al Egipto, donde quitarle sus víctimas. La mayor parte de los ejem
Moisés se habia retirado: se vé, por el ejemplo de plares griegos del Nuevo Testamento, dicen BEELDsE
Jethro, su suegro, que estas adoraban al verdade RoUL el Dios de las impurezas; mas esto puede ser un
ro Dios: las primeras se habian corrompido con los error de los copistas griegos.
moabitas y honraban á Beelfegor. 3." La conducta
de estos pueblos era una peridia; siguieron el con EBegardos y beginardos, secta de falsos es—
sejo abominable de Balaam de seducir á los israeli pirituales ó de falsos devotos, que apareció en Italia,
las, para hacerlos criminales, y escitar contra ellos en Francia y Alemania, hácia el fin del siglo XII, y
la ira de Dios. Núm. c. 31. y 16. Tambien eran principio del XIV.
culpables por haber infestado con la peste el campo Antes de este tiempo los albigenses y los valden
de los hebreos. ..."Que los israelitas, los moabitas, ses se distinguieron por un esterior sencillo, mor—
los madianitas y todos los culpables fuesen castigados tificado y devoto; muchos renunciaban sus bienes,
con la muerte, la guerra, ó un contagio, es lo mis se dedicaban á la oracion y á la lectura de la Sa
mo para la justicia divina; en ninguno de los dos grada Escritura, y hacian profesion de seguir los
casos se la puede acusar de crueldad. V. JusticIA consejos evangélicos. Esta regularidad, verdadera ó
DIVINA. aparente, comparada con la vida licenciosa de la
..........» Es falso que Moisés hiciese ma mayor parte de los católicos y de una parte del
tar los veinte y cuatro mil hombres que habian pre clero, contribuyó mucho á los progresos de la here—
varicado. Al contrario, es evidente que este legisla gía y al descrédito de la fé católica. Muchas perso
dor no hizo mas que ejecutar las órdenes de Dios. nas, afectadas por esta desgracia, conocieron la ne—
Para obedecerlas, manda juzgar á los culpables; y la cesidad de reformar las costnmbres, y de observar
ira del Eterno contra su pueblo, esta plaga que les una conducta mas conforme á las mácsimas del evan
envia, y que Moisés y la asamblea quieren retirar con gelio. Esto dió origen á la multitud de órdenes reli
sus gemidos; la cesacion de esta plaga debida al celo giosas y de congregaciones que se vieron florecer en
de Finées, ¿no anuncia todo esto un azote epidémico, la época de que hablamos. Una vez encaminados
mas bien que una matanza? Las voces hebreas de que los ánimos por esta senda, hubieran ido muy allá, si
se vale Moisés, y las empleadas por el Salmista (sal. el concilio de Letran, celebrado el año 1215, no hu—
105, y.30), lejos de contradecir este sentido, no ha— biera prohibido establecer nuevas órdenes religiosas,
cen mas que establecerlo, y lo confirma el conjunto no fuese que su demasiada variedad introdujese en
del pasaje. No se puede pues sin injusticia hacer res la ¿a confusion. Muchos seglares sin tomar el
ponsablé á Moisés de la muerte de dichos veinte y hábito religioso, formaron asociaciones piadosas, y
c:iatro mil hombres.» se unieron para dedicarse á ejercicios devotos; mas
Pero el autor de la Biblia esplicada dice: «Este nú por falta de instruccion y de luces, muchos dieron
mero de hombres degollados por la cosa menos cri en ilusiones, y por un esceso de piedad cayeron
minal del mundo.» A los ojos de los incrédulos la en otro de libertinaje. Tales fueron los llamados
idolatría, el culto de una infame divinidad (porque begardos, frerotes ó fratricelos, dulcinistas, apostóli
Beefegor fue, segun la mayor parte de los sábios, el cos, &c.: estas sectas no tenian ninguna relacion
Dios de la obscenidad,) las uniones escandalosas, pro entre sí; en nada se parecian, sino en el modo con
hibidas por la autoridad del verdadero Dios y por las que todas se habian estraviado de su origen.
leyes de la nacion, no son mas que bagatelas Es Es necesario distinguir muchas clases de begardos.
falso que estos culpables fuesen castigados simple Los primeros fueron unos franciscanos austeros, lla
mente por haber tomado mugeres madianitas. Caye mados los espirituales, que se preciaban de observar
ron de crímen en crímen por sus seducciones; pasa en todo su rigor la regla de San Francisco, de no
ron de la embriaguez á la impureza, y de la impureza poseer nada propio ni en comun, de vivir de limos
á la idolatría. (DU-CLoT. Vindicias de la Biblia. No nas y de estar cubiertos de andrajos, etc. Habién
ta XV, sobre el cap. 23 del libro de los Números ) dose separado de su órden y negado la obediencia á
sus superiores, fueron condenados como cismáticos
Beclzebub, Dios de las moscas; era adorado por Bonifacio VIII hácia el año 1300. Entonces es—
por los accaronitas. Siendo muchas veces los insec tos rebelados, empezaron á declamar contra el Papa
los en oriente una plaga terrible no es de estrañar y contra los obispos; anunciaron la prócsima refor
que los pueblos de estas regiones hayan algunas ve ma de la Iglesia, por los verdaderos discípulos de
ces encargado á los dioses el cuidado de destruirlos. San Francisco; adoptaron los desvaríos del abad
 BEG 285, BEH

Joaquin, &c. Atrajeron á su partido bastantes her Beglaardos, Beguimos y Begualmas.

manos legos de la Orden tercera de S. Francisco, Estos son los nombres que se han dado á los religio
llamados fratricelos ó pequeños hermanos, en Italia sos de la Orden tercera de S. Francisco. Todavia se
bizochi ó alforgeros, en Francia beguinos, en los Pai les llama en los Paises Bajos begghardos, porque mu—
ses Bajos y en Alemania, begardos; de aqui que to cho tiempo antes que hubiesen recibido la regla de la
dos estos nombres se aplicaron á la secta en general; Orden tercera de S. Francisco, y antes de que se eri
como todos los innovadores, alucinaron por su este giesen en comunidad regular, ya se reunian en muchas
rior mortificado, é hicieron prosélitos. poblaciones, vivian del trabajó de sus manos y habian
A principios del siglo XIV, existian , muchos en tomado por patrona á Sla. Beggha, hija de Pepino el
Alemania, en las orillas del Rhin, y sobre todo en antiguo, y madre de Pepino de Herstal, princesa que
Colonia; y como su fanatismo iba todos los dias en fundó el monasterio de Andona al que se retiró y niu
aumento, sus errores se redujeron á ocho puntos rió en él, segun Sigeberto, en 692. En Tolosa se les
principales. 1.” Pretendian que el hombre puede lle llamó beguinos, porque uno de ellos llamado Bartolo—
gar en esta vida á tal grado de perfeccion, que se mé Bechin les dió su casa para que se estableciesen
haga iumpecable y no pueda recibir aumento de en esta ciudad. Por la identidad del nombre, el pue—
gracia. 2." Los que han llegado á este grado no tie blo tuvo ocasion de imputarles los errores de los be
nen necesidad de orar ni de ayunar; sus sentidos ¿ y beguinos condenados en el concilio de Viena,
estan de tal modo sujetos á la razon que pueden abiendo declarado los pontífices Clemente V y Beni
conceder al cuerpo todo lo que pida. 3." Llegados al lo XII por bulas espresas que estos religiosos de la
estado de libertad no necesitan obedecer ni obser— Orden tercera no eran de ningun modo el objeto de
var los preceptos de la Iglesia..." El hombre puede los anatemas lanzados contra los begardos y beguinos
conseguir en esta vida la bienaventuranza perfecta, esparcidos en Alemania. Mosheim deriva los nom
y poseer el mismo grado de perfeccion que tendrá en bres beggardo, beguina, beata, santurron, de la pa
la ctra. 5.º Toda criatura inteligente es naturalmente labra alemana antigua beggen, pedir con importuni
bienaventurada y no necesita la luz de gloria para dad ó suplicar con fervor.
ver y poseer á Dios. 6." La práctica de las virtudes
es para las almas imperfectas; las que han alcanzado EHBeguima ó beata y beguimer la ó linea
la perfeccion estan dispensadas de su observancia. terio. Este es el nombre que se da en los Paises Ba
7.º. Un solo ósculo de una mujer es pecado mortal; jos á las jóvenes ó viudas que sin hacer voto se reu
pero no lo es el comercio carnal con ella cuando nen para tener una vida devota y arreglada. Para
ha habido tentacion. 8." Durante la elevacion del entrar en el número de las beguinas no se necesitaba
cuerpo de Jesucristo, los que son perfectos no estan mas que llevar lo suficiente para vivir. El sitio en
obligados á levantarse, ni á tributarle ningun res que viven las beguinas se llama beguinería: las que
eto; seria un acto de imperfeccion el distraerse de lo habitan pueden tener en él su menage en parti
a contemplacion para pensar en la Eucaristía ó en la cular ó reunirse muchas. Llevan un hábito negro
pasion de Jesucristo. Véase á Dupin y al P. Alejandro semejante al de las religiosas. Observan ciertas re
sobre el siglo XIV. las generales, y rezan juntas á las horas señaladas;
Estos errores fueron condenados en el concilio ge demas del tiempo lo empiean en trabajar en labo
neral de Viena celebrado en el pontificado de Cle res de aguja, hacer encages, bordados, &c., y asis
mente V el año 1311; pero esla condenacion no aca tir á los enfermcs; tienen libertad para retirarse del
bó entera: cente con el error ni con los desórdenes beaterio; tienen tambien una superiora con derecho
que le siguieron: aun subsistia en el siglo XV. Sus de mandar y á la que estan obligadas á obede—
secuaces se llamaban entonces los hermanos y las cer mientras que permanezcan en el estado de be—
hermanas del libre espíritu; se les llamaba en Alema guanas.
nia begardos y schevcestriones, traduccion del latin Hay en muchas ciudades de los Paises Bajos beate—
sororius, en l8ohemia pigardos ó picardos; en Francia rios tan vastos y tan grandes, que se les podria tener
picardos y turlupinos. Ya entonces habian perdido por pequeñas aldeas. En Gante, en Flandes, hay dos,
toda la vergüenza, decian que no se ha llegado al uno grande y otro pequeño; en el primero se pueden
estado de libertad y de perfeccion hasta que pueda reunir hasta 800 beguinas.
verse sin emocion el cuerpo desnudo de una persona Es necesario no confundir estas beguinas con ciertas
de sexo diferente; de consiguiente se desnudaban mujeres que cayeron en los errores de los beguinos y
en sus asambleas, y esto les valió el nombre de Ada begardos, que fueron condenadas como heréticas por
mitas. Ziska, general de los hussitas, esterminó mu el Papa Juan XIII, de las que no ha quedado vestigio
chos en el año 121. Algunos han dado por error el alguno. V. BEGARDos.
nombre de hermanos picardos á los hussitas, mas es—
tas dos sectas nada tenian de comun. Bélaémotla, en general esta palabra significa
Los sectarios de Molinos renovaron en el siglo XVII
bestia de carga, y toda clase de animales grandes.
parte de los errores de los begardos. Esto basta pa Segun los rabinos, en el libro de Job denota un buey
ra convencernos de que los antiguos Padres de la de un tamaño estraordinario, que crió Dios para dar
Iglesia no se engañaron cuando al ribuyeron los mis un gran festin á los judios al fin del mundo, ó en la
mos estravios y las mismas torpezas á los gnósticos. venida del Mesias.
Los hombres se parecen en siglos diferentes, y las Los judios sensalos bien saben lo que vale esta fá
mismas pasiones producen los mismos efectos. Histo bula; dicen que es una alegoría que indica la alegria
ría de la Igl. Galic. l. 36, año 1311. de los justos significada por un festin. Esta teología
 BEL 236) BEN

simbólica participa algo del estilo de los antiguos pro malvados, á los impíos y á los hombres sin religion
fetas y aun se hallan ejempos de ella en el nuevo Tes y sin costumbres. Sea la que quiera la etimología de
lamento. Pero los rabinos presentan sin rebozo sus ale ésta palabra en hebreo es sinónima del nequam de
gorías, añadiéndoles circunstancias que las mas ve los latinos, y del dictado injurioso de bribon. Algunos
ces las hacen ridículas, y la mayor parte de los judios pretenden que Belial era el nombre de un ídolo de los
las creen sin exámen. Samuel Bochard ha demostra de Sidonia, pero no se trata de esto en los libros san
do en la segunda parte de su Hieroz. l. 5, c. 15 que tos; y no es cierto que cuando dijo S. Pablo «¿qué so
el béhémot de Job es el hipopótamo ó caballo mari ciedad hay entre Jesucristo y Belial?» 2.” Cor. c. 6,
no. Un viajero en 1829 ha probadorque el antiguo y. 15, entienda por este el demonio; esto puede sig
Béhémot (mammouth ó mastodonto) coloso del reino nificar ¿qué sociedad hay entre Jesucristo y los impíos
animal, mas bien le parece á un jabalí de quince pies ó la impiedad? V. las concordancias hebráicas.
de alto que á un elefante, existe en los desiertos del
oeste de la América septentrional. Este animal gi Rendieton. Bendecir, es desear ó predecir al.
gantesco habita las madrigueras en la Rusia septen guna cosa feliz á la persona que queremos bien: asi
irional. No es fuerte, dicen los de la Siberia, por lo vemos en la historia sagrada que los patriarcas en el
que no será muy peligroso ni feroz, calculan su peso lecho de la muerte bendecian á sus hijos, les deseaban
en diez mil libras. Su carne segun ellos es un alimen y predecian los beneficios de Dios. Bajo la ley de
to muy refrigerante, y la tienen como un escelente Moisés habia bendiciones solemnes que los sacerdotes
remedio contra las calenturas). echaban al pueblo en ciertas ceremonias, Moisés dijo
al gran sacerdote Aaron: «Cuando bendigas á los hi
Belen ó Bethleena, villa pequeña ó aldea de jos de Israel les dirás: Que el Señor haga brillar en
la Judea en la que nació Jesucristo. S. Justino que vosotros la luz de su rostro, que tenga piedad de vos—
era de la Samaria cita al judio Trifon la cueva en la otros, que vuelva su cara hácia vosotros y que os dé su
ue Jesucristo vino al mundo, n. 78. Orígenes dijo paz. Núm. c. 6, y . 2. El pontífice pronunciaba es
Celso que la conocian los mismos enemigos del cris las palabras de pie, en alta voz estendidas las manos
tianismo, l. 1, n. 51. Los profetas predijeron que el
y elevados los ojos al cielo. Los profetas y los hom
Mesías naceria en Belen, los judios lo creen aun hoy bres inspirados daban tambien bendiciones á los ser—
dia. Véase Munimen fidei, 1." parte, c. 33. Esto era vidores de Dios y al pueblo del Señor. Los salmos
conveniente para demostrar mejor que descendia de la estan llenos de bendiciones, ó deseos felices en favor
sangre de David, originaria ¿ Belen. Algunos in de los israelitas.
crédulos piensan que esta opinion no está fundada si Mandó Dios que cuando este pueblo llegase á la
no en una esplicacion falsa de la profecía de Miqueas, tierra prometida, se reuniese entre los montes de Hé
c. 5, y 2, donde se lee « y tú Belen de Erata que no bal, y de Garzim.; y que sobre este se pronunciasen
eres sino una de las pequeñas villas de Judá, pero sal bendiciones para los que observasen la ley, y en la
drá de lí un gefe que reinará en Israel, y cuyo na otra maldiciones contra los prevaricadores; asi se
cimiento es de toda eternidad.... se le alabará hastaejecutó por Josué c. 8, y.33.
en las estremidades de la tierra, y será autor de la En el cristianismo se dan las bendiciones con la se
¿ Dicen que esta prediccion se refiere á Zoroba ñal de la cruz para recordar á los fieles que los be
el y no al Mesías, pero nos parece evidente lo con neficios de Dios les son concedidos por los méritos
trario. de Jesucristo, como enseña S. Pablo, Eph. c. 1, y. 3.
1.º El nombre de Zorobabel atesligua que este
gefe nació en Babilonia y no en Belen; no se puede BENDICION. Muchas veces en la sagrada Escri
decir de él que su nacimiento es de ab acterno, que tura significa beneficios, los regalos que se hacen á los
reunió á los israelitas el resto de sus hermanos, que amigos, que generalmente van acompañados de feli
fue reconocido por grande hasta en las estremidades ces deseos de los que los hacen, y de los que los reci
de la tierra, y por aulor de la paz; estos caractéres no ben. Gén. c. 23, y. 2. Josué c. 15, y . 19: I. Reg. c.
convienen mas que al Mesías Jesucristo. 25, y. 27, &c. En este sentido los beneficios de Dios
2." . Lo mismo lo ha entendido el autor de la pa son llamados bendiciones; cuando se dice: Que el Se
ráfrasis caldea, y solo lo ha aplicado al Mesías; esta ñor os bendiga, es decir, que os haga bien. -

era la tradicion de los judios, como se halla en el

Talmud, y en los escritos de los antiguos rabinos; BENDICION significa tambien abundancia. «Aquel,
muchos modernos lo han comprendido tambien del dice S. Pablo, que siembra con economia cogerá p0
mismo modo. Galatino, l. 4, c. 13. co, y aquel que siembra en bendicion ó en abundan
3.° El artículo segundo del V concilio de Cons cia, cogerá en bendicion. Que la bendicion ó la limos
¿ un concilio romano celebrado bajo el Pa na que habeis prometido sea pronta y que sea, como
pa Vigilio, Teodoreto y otros Padres, han condena verdaderamente lo es, una bendicion y no un don de
do á los que querian térgiversar el sentido de esta la avaricia.» 2." Cor. c. 9, y.5 y 6. Jacob desea á
¿ Vanamente se ha esforzado Grocio para su hijo Jose las bendiciones del cielo, es decir la llu
acer valer esta opinion queriendo favorecer á los via y el rocío en abundancia, las bendiciones de las
entrañas y los pechos ó la fecundidad de las mujeres
judios y á los socinianos que veian con sentimiento á
un profeta atribuir al Mesías un nacimiento de toda y de los animales, Gén. c. 9, y 15. El Salmista dijo
eternidad. V. la synopsis de los críticos. al Señor: Wos llenais á todo viviente de bendicionó
de la abundancia de vuestros dones. Ps. 1, y 16.
Iselial. La Escritura llama hijos de Belial á los Bendecir se emplea algunas veces por antífrasis
 BRN 237 BEN
por maldecir. Los testigos falsos buscados contra Na ceremonias de supersticiones, deberian haber empe
both he acusaron de haber bendecido á Dios y al Rey, zado º probar en qué se oponen á la verdadera
de haber hablado mal de uno y de otro. Ill. Reg. ca piedad, á la confianza en Dios, al reconocimiento y á
pítulo 21, y . 13. la obediencia, etc. -

BENDICION DE LA IGLESIA. Cuando uno re BENDICION SAGRAMENTAL. Bendicion que se

cuerda la multitud de supersticiones del paganismo, dá al pueblo con el Santísimo Sacramento, ó con mo—
y la necesidad de quitar estas costumbres á los nue tivo de alguna solemnidad ó devocion particular; es—
vos fieles; cuando uno conoce lo importanle que es to se hace ordinariamente por la tarde despues de
el recordar á los hombres que todos los bienes de este complelas. La Bruyére ha hecho una censura encar—
mundo son dones de Dios, de los que es necesario nizada del modo que en su tiempo se hacian estas ben
hacer un uso moderado; que Dios no nos los dá para diciones en algunas iglesias de Paris; pero esto no su
nosotros solos, etc., se comprende bien por qué la cede en las parroquias en que los curas tienen cuidado
Iglesia ha instituido fórmulas de bendiciones de todas de que reine la décencia, el respeto y piedad conve
clases, por qué bendice las casas, los campos, las fuen nientes.
tes y los rios, los animales y los alimentos, etc.
La mayor parte de los paganos creian que todas las 34 menuncion. (Derecho eclesiástico). Esta pa
partes de la naturaleza estaban animadas por espí labra en materia canónica significa una ceremonia
ritus ó genios que ellos adoraban; los filósofos defen eclesiástica que está en uso para hacer una cosa sa
sores de la idolatria, sostenian que los alimentos y grada y venerable. Los libros santos nos han trasmi
las demas cosas usuales eran un don de estos genios tido muchas ceremonias que se practicaban en la an
ó demonios; los marcionitas y los maniqueos pre tigua ley.
tendian que todos los cuerpos habian sido formados BENDICIONES reservadas á los obispos. No corres
por un principio malo enemigo de Dios. Para comba ponde á todos los eclesiásticos el hacer algunas ben
tir todos estos errores y desengañar de ellos á los fie diciones: las que van acompañadas de alguna uncion,
les, nada era mas conveniente que las bendiciones de y ¿ por esto se llaman consagraciones, estan reser
la Iglesia. «Toda criatura de Dios es buena, dice San vadas al orden episcopal. Tales son la consagracion de
¿ está santificada pory.la palabra
la oracion.» I. Tim. c.
de Dios y por los reyes, la del caliz y la patena, la de las iglesias y
y 5. Luego las bendi la de las aras, la de los altares fijos ó portátiles. Tam
ciones son oraciones, y es, pues, uso apostólico. bien se reservó á los obispos la bendicion de los aba
En las grandes poblaciones, en las que se quila des y abadesas, la de los caballeros y la de los san
cuanto se puede al esterior de la religion, en las que tos óleos. Las demas bendiciones que les pertenecen
se califican de devociones populares las prácticas mas las pueden encargar á cualquiera eclesiástico, como
laudables ha desaparecido el uso de que hablamos; son la bendicion de los corporales y manteles del al
pero las gentes del campo que se creen mas inmedia tar, la de los ornamenlos sacerdotales, la de las cru
tamente bajo la mano de Dios, que ven muchas ve— ces, de las imágenes, de las campanas y cemente—
ces destruidas su fortuna y sus esperanzas por una rios. Tambien pueden dar comision para reconciliar
calamidad, que conciben que nada puede prosperar las iglesias profanadas.
sin la mano de Dios, recurren con mas frecuencia á Los eclesiásticos regulares presumen que no nece
oraciones de la Iglesia, añadiendo buenas obras, li sitan el permiso del obispo para consagrar los cá
mosnas, algun bien hecho á los pobres, etc. Asi, la lices, bendecir los ornamentos, las imágenes y corpo
religion conserva y alimenta en éllas los sentimientos rales; pero se dispuso en un reglamento que hizo la
de humanidad. asamblea del clero en Paris en 1645, en el art, 28,
La costumbre que siempre se ha observado en la hablando de los religiosos que se estableciesen de
Iglesia católica de bendecir y consagrar todo lo que nuevo, que mo consagrasen ni ellos ni otros eclesiás—
sirve para el culto divino, las vestiduras sacerdota ticos inferiores á los obispos los cálices, por privile—
les, los paños y los vasos del altar, los edificios mis— giados que fuesen; y en el art. 29 se añadió, que
d

mos en que se celebran los santos misterios, es un aquellos que tenian un privilegio particular para ben
testimonio de su fé; con esto nos enseña la elevada decir los ornamentos de la iglesia, imágenes y corpo—
idea que tiene de los misterios mismos, por medio de rales, no pudiesen hacerlo mas que en su casa y
los cuales el Hijo de Dios se digna estar realmente para el servicio de ella; que por lo respectivo á los
presente entre nosotros. Como los protestantes se oratorios y cementerios, no pudiesen bendecirlos, ni
apartaron de esta creencia antigua y universal, se reconciliar las iglesias sin que diese su permiso por
han visto obligados á suprimir todo este aparato es— escrito el obispo diocesano.
terior que deponia contra ellos. BENDICIONES que se les permiten á los presbíteros.
Pero no han podido llegará probar que las bendicio Las bendiciones que son de su inspeccion propia, sin
nes sean una institucion moderna; la mayor parte se permiso de los obispos, son: las de los esponsales, las
encuentran en el sacramentario de S. Gregorio; en el de los matrimonios, de los frutos de la tierra y la del
fondo era el mismo que el del papa Gelasio, que vivió agua bendita, etc. El Pontifical romano tiene la fór—
en el siglo V.; y este pontífice no era su primer autor. mula de toda especie de bendiciones; pero cada ecle
Tambien se usan todavia entre las diferentes sectas de siástico debe seguir aquellas que le estan prescritas
cristianos orientales, separados de la Iglesia romana en el ritual de la diócesis donde ejerce su ministerio.
hace mas de 1200 años. Los protestantes que, á pe BENDICION sobre el pueblo. Los obispos y los pres
sar de la autoridad de S. Pablo, tratan á todas eslas bíteros están en costumbre de echar su bendición al
TOMO I. 26
 DEN 238 BEN
ueblo. La facultad de echarla alzando la mano con alguna al carácter del abad, y aun no se mira como
señal de la cruz,acompañándola con oraciones, indispensable, porque los abades comendatarios no
no pertenece mas que á los obispos. Los presbíteros estan en uso de recibirla. Es cierto que algunos cano
no pueden echarla de este modo sino cuando cele nistas, como Tamburini y Felino, dicen que el abad
bran misas, ó cuando hacen rogativas solemnes, y debe pedir la bendicion dentro de un año, y se le de
cuando administran los sacramentos, absteniéndose be dar en un dia festivo; pero no se mira como nece
del uso de la fórmula sit nomem Domini benedictum saria sino en el caso que el abad quiera ejercer algu
etc., humilliate vos ad benedictionem, porque esta fór nas funciones espirituales anejas á su carácter, como
mula está reservada á los obispos. Algunos abades, la de conferir órdenes á sus religiosos; porque si no
or un privilegio emanado de la Santa Sede, tienen se trata mas que de bendecirlos, puede hacerlo sin
a facultad de echar la bendicion al pueblo de un mo esta circunstancia. Con mayor razon puede gozar de
do solemne como los obispos; aunque solo pueden las rentas pertenecientes su abadía; pero el abad
usarlo en sus propias iglesias despues de vísperas, de que ha recibido la bendicion una vez, puede ser pro
la misa y de los maitines. Por consiguiente, no pueden movido á otra abadía sin necesidad de repetir esta
echar la bendicion en particular como ellos en las ceremonia que no se reitera. Las abadesas, asi como
calles y fuera de su iglesia, porque les está prohibido los abades, deben recibirla: hay una fórmula espre
por un decreto de la sagrada congregacion de 2 de sa para ellas en el pontifical romano; y se la debe dar
agosto de 1609;, y como es una regla en materia de el obispo diocesano. Las sumarias de las bendiciones
bendiciones que el que está en un orden inferior no la de los abades ó abadesas estan comprendidas en la
eche al pueblo en presencia de otro eclesiástico mas primera seccion del artículo 1.° del arancel de 29 de
digno que él, los abades no pueden usar de su privi setiembre de 1722, y el artículo s.º de la disposi
legio, con arreglo á ella, en presencia de un obispo cion del consejo de 30 de agosto de 170, que fijan
ó de otro prelado superior, á no ser que tengan un el derecho de registro en cinco pesetas. El primer
permiso particular para ello. capitular hecho en Aix-la-Chapelle en 689 prohibe á
BENDICION de un predicador. En varias iglesias, las abadesas el echar la bendicion públicamente con
¿Pº en las catedrales, hay costumbre imposicion de manos y la señal de la cruz á los hom
e recibir la bendicion el predicador antes de empe bres, y dar el velo á sus religiosas usando en la ce
zar el sermon; esta bendicion ha sido motivo de mu— remonia de la bendicion sacerdotal.
chos pleitos entre los curas propios y los vicarios per BENDICION con el Santísimo Sacramento. Hay
pétuos; pero se decidió que los curas propios, en los en la Iglesia otra especie de bendicion que es la
dias que pueden oficiar, tienen derecho á echar la que se hace mostrando á los fieles, la Eucaristía,
bendicion al predicador, con esclusion del vicario per haciendo al mismo tiempo, la señal de la cruz. Los
pétuo. Asi se dispuso por una sentencia que dió el ¿ tienen potesiad para darla; pero no de
gran consejo en 21 de octubre de 1675 en favor de en hacerlo sino en los dias prescritos por la lgle
los religiosos de la abadía de Ntra. Sra. de Monzon, sia. Cuando los fieles la desean fuera de este tiempo
de la Orden de S. Benito, congregacion de S. Vannes, se necesita un permiso particular del obispo, lo cual
como poseedores del curato primitivo de S. Martin está dispuesto asi para que la reciba el pueblo con
del mismo pueblo, contra el vicario perpétuo de aque mayor respeto concediéndola menos frecuentemente.
lla parroquia; manteniéndoles á los religiosos en el Por lo mismo se procurará evitar el dar dicha bendi
derecho de dar la bendicion al predicador cuando asis cion en la orilla del mar con el fin de calmar una bor
len á la iglesia. Los abades comendatarios tienen rasca, ó cerca de un fuego para que se apague; por
tambien el mismo derecho en sus iglesias, segun la que como Jesucristo (segun observa sábiamente el au
sentencia pronunciada en favor del abad de S. Mes— tor de las leyes eclesiásticas) no está obligado á hacer
min de Orleans el 1.° de setiembre de 1675. milagros cuando á los hombres les parece, bastaria
BENDICION de los abades y abadesas. En cuanto que su presencia no cambiase nada el orden natural
á la bendicion que reciben los abades despues de su para que esta circunstancia disminuyese el respeto
eleccion y confirmacion, es propia de los obispos dio— que le debemos, sirviendo de burla á los hereges y á
cesanos, como hemos dicho; sin embargo, los aba los impíos.
des de la Orden de Valleumbrosa, segun dice Tam BEÑDICION que el Papa dá por escrito. Es bas
burini, pueden recibirla de cualquier prelado: el mis— tante familiar al Santo Padre la bendicion que dá
mo autor añade, como hemos dicho en el artículo or escrito á todos los fieles en el principio de sus
ABAD, que Juan, abad del Cister, obtuvo privilegio ulas, la cual dice asi: Salutem et apostolicam be
del papa para bendecir por sí mismo á los abades y nedictionem; esto es, salud y bendicion apostólica:
abadesas de su Orden. Lo mismo casi acontece entre esta la omite cuando escribe á los que no estan en el
nosotros con la bendicion de los abades con respecto seno de la Iglesia. Cuando lo hace en estos términos
al que debe dársela, como con su eleccion y confir— con alguno que está escomulgado, se le juzga desde
macion, pues le toca al obispo por derecho comnn, y luego absuelio por estas palabras de benevolencia y
le está reservada especialmente por una declaracion caridad. Tambien la envia algunas veces el Sumo
de la congregacion de Ritos del mes de diciembre de Pontífice á los que estan en el artículo de la muerte;
1631. La fórmula de la bendicion de los abades está pero los obispos no pueden usarla. -

en el pontifical; pero tiene algunas diferencias segun BENDICION nupcial. La bendicion nupcial, que
el modo con que se hace, si es por autoridad apostó es la que reciben los que se casan, es muy rota
lica, si en virtud de un rescripto, ó por la autoridad ble. El concilio de Trento exhorta al esposo y á la
ordinaria: en lo demas, la bendicion no añade cosa esposa á que no habiten juntos en la misma casa an
 BEN BEN
239)
tes que el sacerdote les haya echado la bendicion en la rio en una asamblea que celebró el clero en Francia
iglesia. El mismo concilio quiere que la reciban de su en 1655; porque al obispo se le mira como el primer
propio párroco, sin que otro alguno mas que éló el párroco de todas las iglesias de su diócesis.
órdinario pueda conceder permiso á otro presbítero pa A los franceses que forman la comitiva de un em
ra darla, no obstante cualquiera privilegio y costum bajador del rey, nombrado en algun pais hereje, donde
bre, aun de tiempo inmemorial, que reputa mas bien no hay Iglesia católica, les puede legítimamente dar
como un abuso que como costumbre legítima. Añade la bendicion nupcial su capellan, con tal que guarde
ademas, que si algun párroco ú otro sacerdote regu las mismas reglas que se observan en Francia. Segun
laró secular fuese tan temerario que casase ó echase estos principios, se declaró válido por una sentencia
la bendicion á los que han contraido esponsales en del parlamento de París el 29 de marzo de 1672 un
otra parroquia que la suya, sin permiso del párroco de matrimonio que se habia celebrado en la casa de un
aquella, aunque alegase sobre esto un privilegio par— embajador por un jesuita capellan suyo en una ciudad
ticular, ó una posesion de tiempo inmemorial, quede hereje donde no tenian iglesia los católicos. Sin em—
suspenso de derecho hasta que le absuelva el ordina bargo, el mismo tribunal rehusó este privilegio á los
rio del párroco que debia asistirles al matrimonio, ó capellanes de los buques, prohibiéndoles por un de—
de quien habian de recibir la bendicion. Manda el ar creto del 16 de febrero de 1673 celebrar matrimonio
tículo tercero del edicto del mes de marzo de 1797, alguno sin permiso del obispo ó de los párrocos. Por
concerniente á las formalidades que se deben guar— este mismo ejemplo se decidió que los matrimonios
dar en los matrimonios, que se proceda estraordina de los soldados del rey no pueden ser válidamente ad
riamente contra los sacerdotes ó párrocos que se apar ministrados por el capellan del regimiento, á no ser
ten de las disposiciones del concilio de Trento, v que º este permanezca bastante tiempo en un pais don
ademas de las penas canónicas que les impongan los e no haya iglesia católica.
jueces eclesiásticos, los que fueren beneficiados que La forma de la bendicion nupcial está en el ritualde
den privados por la primera vez de la percepcion de cada diócesis; pero la gran cuestion que agitó mucho
la renta de sus beneficios por espacio de tres años, re á los doctores en 1712 fue la de resolver si esta bendi
servándoles solamente lo que fuere necesario para su cion nupcial es de la esencia del sacramento del ma—
subsistencia, la cual fijó el edicto en aquel tiempo en trimonio. La trataremos particularmente en el artícu
seiscientas pesetas en las ciudades mas grandes, y en lo MATRIMoNIo, á donde naturalmente pertenece. En
trescientas en todos los demás pueblos; y se mandó tretanto observaremos solamente que se puede dar en
que el sobrante de las rentas se ocupaseó embarga todas partes, y no solo en la Iglesia, cuando lo ecsigen
se á peticion de los procuradores de S. M. para em las circunstancias; y aun hay quien diga que los pár
plearlo en obras pías, segun lo determinase el prela rocos son árbitros en juzgar si es conveniente hacer
do diocesano. Si los que contravinieren no fueren be— lo sin necesidad del permiso del obispo. (Estracto del
neficiados, sufrirán la pena de destierro por tres años, diccionario de Jurisprudencia.)
la primera vez; y si fuesen regulares los enviarán á
un monasterio de su Orden, el que el superior les 3% nemedietinas. Derecho canónico.) Se lla
asigne fuera de su provincia, á donde irán desterra— man asi las religiosas que viven en claustro, bajo una
dos y permanecerán reclusos por un tiempo deter regla parecida á la de S. Benito. Tienen por fundado
minado, sin tener carga ni funcion alguna, y aun me ra de su Orden á Sla Escolástica, hermana de aquel
nos, voz activa ni pasiva en la comunidad. En caso de santo Patriarca. Se establecieron en Francia definiti
reincidencia, manda que el destierro sea de nueve vamente en 1618, y tienen una abadesa por superio—
años para los unos y para los otros, dejando salvo el ra. (Estracto del diccionario de Jurisprudencia.)
aplicar mayores castigos si estos se hubiesen presta
do á la celebracion de un matrimonio hecho por me— 34 semedietano. (Derecho eclesiástico.) Asi
dio de un rapto con violencia. se llamaba el religioso de la Orden de S. Benito.
Los párrocos, lo mismo que los ordinarios, pueden ORIGEN DEL ORDEN DE SAN BENITo. Casi doscientos
delegar á los presbíteros para la bendicion del matri años hacia que se habia introducido la vida monástica
monio. Al vicario instituido debidamente en una par— en la parte oriental de la cristiandad por S. Antonio,
roquia se le reputa como encargado por el cura de to S. Pacomio, S. Basilio y S. Agustin, cuando S. Beni
dos sus derechos; sin embargo, éste puede reservar— to, despuesde haber vivido largo tiempo en la soledad,
se el de asistir al matrimonio ó revocarlo despues de escribió su regla para el monasterio de Monte-Casi
concedido. El vicario encargado por el párroco pue— no, entre Roma y Nápoles. Esta regla se aprobó en
de tambien comisionará otro presbítero para la ben 595 por S. Gregorio el Grande en un concilio celebra
dicion nupcial, á menos que se lo haya prohibido es do en Roma; y como era menos austera que las cono
presamente; pero cuando él dá la comision, no se cidas hasta entonces en el Oriente, pareció muy apro
estiende esta mas que al distrito de la parroquia don pósito adoptarla en el Occidente, donde se estendió
de es vicario, porque tiene la misma jurisdicion que desde luego, particularmente en Inglaterra. Tambien
el párroco en ella. Por lo demas, el sacerdote comisio se admitió en Francia, y ha servido de fundamento á
nado por el vicario no puede comisionar á otro, por— las reglas particulares de la mayor parte de las Orde
¿ está en el caso de la regla que un delegado no pue nes religiosas que se formaron posteriormente en esta
delegará otro. Los párrocos presumian que el or— parle del mundo cristiano. S. Benito recomendó con
dinario no podia dar cumision un sacerdote contra especialidad á sus religiosos el trabajo corporal y la
la voluntad de ellos, para asistir al matrimonio en el edificacion por medio de la práctica de las buenas obras.
término de su parroquia; pero se decidió lo contra Ellos por su parte, observandofielmentesus lecciones,
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adquirieron pronto propiedades bastante grandes, murió en 1157, contaba casi dos mil casas de su ¿
rompiendo de nuevo varios terrenos con sus manos. risdicion en Alemania, en Polonia, en España, en In
El respeto que se adquirieron por sus virtudes acabó glaterra, en Italia, en Francia y en el oriente. No era
de enriquecerlos ¿ donaciones que les hacian los necesario mas, porque al cabo de dos siglos la discipli
fieles en todas partes; pero las guerras que afligieron na estaba mucho mas relajada. S. Odon no ecsistia,
á la Francia á últimos de la primera dinastía causa— ro S. Roberto, Abad de Molemo, que habia fundado
ron una gran relajacion en la disciplina de estos reli ¿ del Cister en 1098, y vivia entonces, se dedicó
giosos. Sin embargo, habiéndose tranquilizado la Fran enteramente á dar un nuevo lustre á la vida monás
cia en tiempo de Carlomagno, también se restableció lica.
la regla por los cuidados de S. Benito de Aniana, á Division de los monges de S. Benito en dos Ordenes
uien Luis el Bueno concedió despues una autori diferentes. El santo abad Roberto hizo que se obser—
ad sobre todos los monasterios del reino. Este santo vase en la casa del Cister la regla de S. Benito á la
abad procuró concordar la regla de S. Benito con las letra, sin modificacion alguna. Sujetó á los religiosos
demas reglas monásticas que en aquel tiempo ecsis al trabajo de manos, al silencio mas esacto, y les pro
tian. Dió á lcs religiosos las instrucciones que sir hibió alejarse del monasterio; los hizo renunciará to
vieron de base en el año de 817 al gran reglamento de da especie de privilegios y dispensas, para que el de
Aix-la-Chapelle, inserto en las capitulares de nues seo de sostenerlas no fuese una nueva ocasion de re
tros reyes, mandando que se observase con tanta esac lajarse. S. Roberto vistió el hábito blanco, y por eso
titud como la regla de S. Benito; pero la Orden se re dieron el nombre de monges blancos á los del Cister,
sentia siempre de su primera relajacion: se desenten como habian dado el nombre de monges negros á los
dieron del trabajo de manos con el pretesto de dedi de Cluni. Ilizo que todas las fundaciones, los diez
carse al estudio y á la oracion; los abades solo pensa mos y rentas que habian usurpado á los párrocos se
ron en aprovecharse de los bienes de los monasterios les devolviesen; que los que fuesen nombrados supe
para la ostentacion de sus personas; querian ser tanto riores dejasen los vestidos pontificales, la cruz, la mi
como los obispos, y aun se adelantaron á que los ad tra, el anillo y todos los ornamentos que habian in
miliesen por su reputacion en el parlamento. En se troducido el lujo y la vanidad en los claustros. Hasta
guida las incursiones de los normandos acabaron de entonces la casa del Cister fue la única en donde se
arruinarlo todo, y la disciplina se habia perdido en— habia puesto en práctica la reforma. Habiéndose au
teramenle cuando se apareció S. Odon, hombre tan mentado el número de religiosos en ella de suerte que
recomendable por su celo como por sus virtudes. Sus ya no cabian, S. Esteban, que era entonces el tercer
primeros cuidados fueron el restablecer la disciplina abad, tuvo que enviarlos á que fundasen nuevos mo
monástica en la casa de Cluni, que es una abadia de la nasterios. De este modo se formaron en 111 las aba
provincia de Borgoña, fundada en 910 por Guillermo días de la Ferté, diócesis de Chalons-Sur-Saone, y
el Piadoso, duque de Aquitania y conde de Auvernia. la de Pontiñi, en la diócesis de Auxerre, y el año des
Este sabio reformador reanimó la regla de S. Benito, pues las de Claraval y de Morimond, que son lla
la modificó algun tanto, y tomó el hábito negro. Abra madas las cuatro hijas del Cister. Los monasterios
zaron su reforma un gran número de religiosos, y se que habian abrazado la reforma se reunieron y for
fundaron nuevos monasterios para ellos; escogieron maron esta Orden particular, que se llama de los
algunos de estos para introducirla en otros monaste Cisterciences. Hicieron entre sí un estatulo de union
rios antiguos, lo cual pudo efectuarse poniéndolos ba en 1119, el cual se conoce con el nombre de carta de
jo la dependencia del Abad de Cluni: asi sucedió con caridad. Lo redactó S. Esteban y los otros cuatroaba
el famoso monasterio de Luxevil en el Franco-Conda des nuevos, á quienes por esta razon llamó Clemen
do. La casa de Cluni por el título de su fundacion se te IV los arquitectos de la Orden del Cister. Esta Orden
sujeto á la proteccion especial de S. Pedro y del Papa, se aumentó considerablemente en poco tiempo por la
prohibiendo á todas las autoridades seculares y ecle— admiracion que causaban las virtudes que se practi
siásticas el que perturbasen á los monges en la pose caban en ella. Se estendió por toda Europa en menos
sion de sus bienes, ni los incomodasen en la eleccion de 55 años, y llegó á tener quinientas casas ó mo
de sus abades. El abad de esta casa se llamó el abad de nasterios; pero como la reforma del Cister se hizo por
los abades, sin consideracional de Monte-Casino, áquien nuevos individuos, cuyo ejemplo no quisieron seguir
le convenia este título mas legítimamente. De resul— los antiguos monges de S. Benito y de Cluni, forma
tas de esto se juzgaron esentos de la jurisdicion de los en el dia una clase enteramente aparte; y como el
obispos , y aún hicieron lo posible para estender este seilustre S. Bernardo, abad de Claraval, es el que mas
ha distinguido en la Orden del Cister, llaman Ber
privilegio á los monasterios de su jurisdicion; y asi la
primera congregacion de muchas casas unidas bajo nardos á los individuos de la misma. En el siglo XIV.
una cabeza inmediatamente sujeta al Papa, para no se habian vuelto á relajar los monges sin que los del
hacer mas que un cuerpo, ó como se dice ahora, una Cister se preservasen mas que los otros. Los abades,
Orden religiosa, fue la de Cluni. La disciplina que se como que eran prelados, querian hacer de señores, y
habia restablecido en esta congregacion se hubiera bien pronto imitaron su ejemplo los que tenian oficio
mantenido asi probablemente si no hubiera pensado en los monasterios, de donde tomaron su origen los
en aumentarse, tratando de fundar nuevos monaste— oficios llamados claustrales ó beneficios regulares.
rios, porque fue preciso enviar los sugetos mas celosos Reforma de S. Mauro. La Orden de Cluni y la del
para formarlos; y se multiplicaron tanto, que la Or— Cister estaban casi tan relajadas la una como la, otra
den, bajo el gobierno de Mauricio de Mont-Boisier, cuando el concilio de Trento arregló la reforma de los
conocido con el nombre de Pedro el Venerable, el cual monges. La de Cluni puso en planta la reforma de
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S. Mauro, que fue el dichoso fruto de las sabias dis mes de junio de 1671, en la cual se mandó por los
posiciones del concilio. Esta es la piadosa y sabia con religiosos de las Ordenes reformadas no pudiesen en
regacion que Gregorio XV confirmó con este nom adelante establecerse en los monasterios que no ha
¿ se habia empezado á ejecutar en 1613 á so bian aceptado la reforma, y que no se verificase
licitud de Juan Renand, abad de S. Agustin de Limo union alguna sin haber obtenido de antemano los des
ges, y por los inonges de la congregacion de S. Van pachos de S. M., so pena de nulidad, etc. Cinco
res, la cual empezó en la Lorena en 1597. El prin años despues, en 1676, logró la Orden de Cuni los
cipal autor de la reforma fue Dom Darbouze: este re despachos competentes con el objeto de celebrar un
ligioso sucedió al cardenal de Guisa; por sus talentos congreso para esta reunion. La verificaron en París
y sus virtudes le eligieron abad regular de Cluni. Co en el colegio de Cluni, y tuvieron un capítulo general
mo todos los religiosos de esta Orden no tuvieron por en presencia de los comisarios régios. Despues de
conveniente adoptar la reforma, se dividió el cuerpo muchas discusiones convinieron en adoptar los anti
en dos ramas, de las cuales la una es conocida con el guos estatutos redactados en 1458 por Juan de Bor
nombre de antigua observancia, y la otra con el de bon, el cual era en aquel tiempo abad de Cluni; pero
observancia reformada. Hay una gran diferencia en el en los de la antigua observancia no quisieron reci—
gobierno de las dos, aun en el hábito; sin embargo, birlos sino con las modificaciones mismas que habia
ambas tienen un mismo superior que es el abad de introducido la relajacion: los de la observancia refor
Cluni, con el título de abad superior, general y admi mada no quisieron quitar un ápice de la austeridad
nistrador perpetuo de toda la Orden de Cluni: por este de los mismos estatutos, por lo que fue imposible
concepto es consejero nato en el parlamento de Pa conciliar los inconvenientes que oponian los unos y
ris; pero desde que un eclesiástico secular podia ob los otros. -

tener en encomienda la abadía de Cluni, los religiosos Las dos observancias tienen un mismo capítulo,
reformados procuraron gobernarse con separacion de pero con distintos oficios. La diversidad de las dos ha
los de la antigua observancia; pues no querian que ecsigido que cada una tratase sus negocios separada
un abad forastero tuviese en ellos la misma autoridad mente. Por esta razon, la una y la otra tienen su
que antes tenia un abad regular. Para suplir la re definidor particular que en la celebracion de los ca—
presentacion de éste nombran un superior los defini— pítulos generales tienen su deliberacion, sin que los
dores de su observancia. Este superior tiene la mis— de la antigua comuniquen con los de la nueva obser
ma autoridad que un abad, la cual es tanto mas le vancia. Solo se reunen en el mismo definitorio ha
gítima cuanto que la obtiene del capítulo general que ciendo causa comun los unos y los otros, cuando se
se convoca cada tres años con este objeto el tercer do trata del interés de toda la Orden. Como reside la
mingo despues de Pascua; de lo que resulta que af autoridad legislativa, si es permitido esplicarse en
abad comendatario de Cluni, aunque superior de to estos términos, en los capítulos generales de la Or
da la Orden de S. Benito, no le miran los reformados den, el abad está tan sometido á ellos como los reli—
mas que como á un superior honorario. giosos; y aun lo está mas, porque puede sufrir al
Este abad tiene, sin embargo, prerogativas sobre guna correccion del capítulo, pudiéndole deponer
ellos: si en el intérvalo de un capítulo á otro . de su dignidad cuando ha incurrido en alguna falta
ocurre el fallecimiento de su superior, tienen obliga esencial. Asi se esplican las bulas de Gregorio IX
cion de acudir á él para que les permita reunirse para Nicolás IV; por lo cual el gobierno de la Orden de
nombrar otro en el intermedio; y el nombrado no pue Cluni participa mucho del gobierno aristocrático. Las
de entrar en el ejercicio de su destino sin que haya dos observancias en comun celebran su capítulo al
obtenido del abad su aprobacion y consentimiento mismo tiempo, y bajo un solo superior, cada una por
por un escrito, que llaman Despachos del vicariado; la interposicion de sus definidores, que son en nú
pero es preciso observar que siempre que recurren á mero de quince. Se nombran en él los superiores de
él para una convocacion ó para prestar su asenso por cada casa, que no pueden conservar su destino mas
escrito, no puede negar lo que le piden, segun se de— que tres años entre los religiosos reformados, á no
cidió por un decreto del gran consejo de 30 de mar— ser que otro capítulo los continúe por otro trienio;
zo de 1705, atendiendo á que el recurrir á él en se pero pasado este término es preciso que obtenga la
mejantes ocasiones es una deferencia. Por lo que toca prelacía otro religioso, á no ser que se la devuelvan
á los religiosos de la antigua observancia, que se lla al que la desempeñaba anteriormente si lo juzgasen
man cluniacenses, tiene sobre ellos la misma autori— conveniente. Lo mismo sucede con el superior princi
dad el comendatario que si fuese abad regular, y pue pal, que tiene el título de Vicario general: su auto
de llamarse con razon el administrador perpetuo de ridad solo dura un trienio, si acaso no le reeligen
ellos, pues reconocen su jurisdicion, y es en todos por otros tres años en el capítulo siguiente.
sentidos sugefe y superior general. Por lo que hace á las casas de la antigua obser
Los benedictinos reformados no perdian ocasion vancia, los superiores pueden continuar en ellas por
de estender su reforma á los monasterios de la Or— el tiempo que el capítulo general, quiera; por esta
den de Cluni en el siglo pasado, á fin de que se razon son casi siempre perpetuos los superiores. Se
verificase en lo sucesivo una plena y general union; presume que los reformados miraron esta continua
para ello habian imperado hastantes bulas que pa cion ó perpetuidad como uno de los motivos de la re
recia que les preparaban el camino á su intento; lajacion de la disciplina, pues se han impuesto una
pero fue muy al contrario, pues dieron ocasion á ley de no tolerar las reelecciones.
pleitos en los tribunales. Luis XIV, para cortar las º sue del nombramiento de los superiores se
dificultades que ocurrian, dió una declaracion en el procede al de los visitadores. Estos estan encargados
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r oficio de vigilar la ejecucion de todo cuanto se ha de 1645, se pusieron en ejecucion con las cargas,
ispuesto en el capítulo. Pero antes de que ejerzan cláusulas y condiciones referidas en este decreto, que
sus funciones es necesario que los decretos del capí tiene cuarenta y dos artículos.
tulo hayan recibido la sancion del príncipe por me De los beneficiados en la reforma. Como la reforma
dio de unos despachos que hayan sido registrados. de la congregacion de S. Mauro hubiera esperimen
Observaremos con motivo de ¿ visitadores que se tado algunas dificultades si no se hubiera permitido
resolvió en el capítulo general celebrado en octubre á dicha congregacion el conservar los beneficios que
de 1693, y confirmado por un breve del Papa, acom poseían sus religiosos, Urbano VIII y Luis XIII per
pañado de los despachos registrados en el gran con mitieron á los religiosos de la misma el poseer no so
sejo, en donde la Orden tiene sus causas de confisca— lo aquellos beneficios pertenecientes á los monaste
cion, que ningun religioso, ni aun el prior de la co— rios en que estaba introducida su reforma, sino aun
munidad, pueda entablar pleitos sin haber obtenido los de los demas monasterios de S. Benito, incluyen
el consentimiento del visitador de la provincia. Cuan do en ellos los de la congregacion de Cluni, sin estar
de ocurren dificultades en la ejecucion de lo que se obligados á la residencia, aunque por el título de su
ha resuelto en un capítulo, se recurre al síndico de fundación la ecsigiese indispensablemente. Pero se
cada observancia, y él está encargado de dar todos gun la bula de Urbano VIII, los religiosos no pueden
los pasos y hacer las demas diligencias necesarias recaudar por sí mismos las rentas de los beneficios,
para poner en ejecucion los decretos del capítulo. Los porque pertenecen á la congregacion: los titulares
síndicos de las dos observancias se titulan, por razon tienen que dar sus cuentas al procurador general de
de sus funciones, procuradores generales; tienen al su respectiva observancia, con el objeto de gobernar
mismo tiempo el encargo de promover los negocios y administrar sus prioratos y beneficios, percibir sus
concernientes á cada individuo en particular, en el rentas y emplearlas segun la órden de los principales
caso de que él no pueda hacerlo por sí mismo. Les superiores. Tampoco pueden trasladarse sin el per
contribuyen con una cuola los beneficios simples y miso espreso y por escrito de los mismos, ni solici
las casas conventuales de la Orden por razon de este tar, ni aceptar beneficio alguno cualquiera que sea:
trabajo. En lo antiguo variaban sobre el mas ó me lo cual se confirmó por un decreto del gran consejo
nos que se les debia dar: las contribuciones no eran dado el 17 de febrero de 1758 entre dom Boudinot,
iguales, y de aqui se originaban disputas. Con el procurador general, y dom Peru, prior de S. Sabinia
objeto de cortarlas se hizo una tarifa en el capítulo no del Puerto. No le ha parecido á Denisar este de—
general celebrado en 1738, y se puso en ejecucion, creto una decision conforme á los buenos principios,
segun, observa Denisart; por una sentencia contra— porque es contrario, segun dice, á la obligacion que
dictoria entre los procuradores generales de las dos impone la Iglesia sin distincion á todo beneficiado de
observancias el 5 de febrero de 174%. Aunque la ta velar por sí mismo el cumplimiento de las cargas que
rifa estaba vigente, el señor de San Albin, arzobispo les están anejas; y á pesar del juramento que hacen
de Cambray, trató de rehusar la cuota que le pedian los benedictinos reformados ante los altares de ceder
como prior comendatario de San Martin del Campo; á la comunidad las rentas de sus beneficios, inculca
pero se le condenó á pagarla por un decreto del real en que este juramento no les dispensa de lo prescri
consejo de 22 de febrero de 177. to por los cánones á los beneficiados. Pero este autor
En cuanto á las dificultades que pueden ocurrir demuestra en este lugar un celo ecsagerado por la
con relacion al régimen de un monasterio en el inter disciplina canónica. Los estatutos de la Iglesia no son
medio de un capítulo á otro, como seria preciso espe de modo alguno perjudicados, porque los religiosos
rar la celebracion de una asamblea general para ¿ han hecho voto de no tener nada propio, lo aban
resolverlas, se reune en este intérvalo un consejo onen todo á sus superiores: su primera obligacion
particular en Cluní, compuesto de los cuatro mas es practicar la regla, y no se aparta de su observan
antiguos religiosos de dicha abadía, llamados los cua cia el que obedece y observa al mismo tiempo los cá
tro seniores, y de los que tienen algun oficio en ella, nones, poniendo todas las rentas en comunidad, y de
¿ en él se deciden provisionalmente los puntos que ¿ á un hombre destinado al efecto el cuidado de
an motivo de disputa en cada monasterio parti as cargas del beneficio, por temor de el religio
cular. so beneficiado no se distraiga mucho del espíritu de
En estos últimos tiempos ocurrieron varias desave su profesion con los cuidados particulares que tendria
mencias en la congregacion de San Mauro, las cua que tomarse administrándolo por sí mismo. Por otra
les han dado margen á diversos reglamentos, entre parte, los cánones tienen mucho mayor confianza en
los cuales se halla un decreto de 6 de julio de una casa entera que en un simple religioso para el
1766, en el que se manda sean ejecutadas las cartas gobierno de un beneficio.
patentes del 10 de setiembre de 1710, y del mes De los beneficiados en la antigua observancia. No su
de agosto de 1618, segun su forma y tenor, asi cede lo mismo en esta, aunque se pueda decir con
como la bula de Gregorio XV de 27 de mayo de 1621, verdad que los religiosos están obligados por razon
la de Urbano VIII de 21 de enero de 1627, con el de su voto de pobreza á reunir en una masa comun
acequatur que les acompaña, su fecha el 15 de ju— loda la renta de los beneficios que obtienen, y que
nio de 1681; proveyendo al mismo tiempo que las fundado en estos principios lo decidió asi el gran con
declaraciones sobre la regla de San Benito, y las sejo en 16 de setiembre de 1682: los religiosos no
constituciones de la congregacion de San Mauro, re reformados, por otro nombre cluniacenses, se han
dactadas y aprobadas en 1642 por el capítulo gene mantenido en la costumbre de administrar los bene
ral de la congregacion, y confirmadas en otro igual ficios que obtienen; y como los estatutos de Juan de
 s

BEN 243 BEN

Borbon se lo permiten, las audiencias, que no procu. febrero de 1720, disponiendo que en vez de hacer
ran inquirir sobre la disciplina introducida por un las declaraciones en persona, como acabamos de de
hombre tan respetable, la toleran. cir á los sectarios ó escribanos de los provisores ó
En la congregacion de S. Mauro no solamente es— jueces reales, acerca de la situacion de los beneficios,
tan ¿ de gozar personalmente de su be se presentasen solamente los religiosos benedictinos
neficio, como acabamos de observar, sino que tam - ante el juez del distrito en que estuviese situado el
poco lo p0dian dejar antiguamente sin el consenti monasterio de su residencia, para que en presencia
miento de los principales ¿ Con esta pre de él, y acompañados del prior del monasterio (el
caucion, que perpetuaba los beneficios entre ellos, no cual debia certificar la firma y la verdad de los ti
les quedaba mucho que esperar á los que los confe tulos), pasase su p0der especial en doble minuta an
rian por derecho ordinario, á los que los obtenian á la te el notario. Este poder debia estar firmado del que
vacante, y á los graduados; por lo cual se permi prestaba la declaracion, y de su ¿. despues le
tió á los religiosos por un edicto del mes de noviem galizado por el juez. Por lo regular se daba este po—
bre de 1719 el renunciar sus beneficios en favor de der al prior ú otro religioso, y con él comparecia en
sugetos capaces de obtenerlos aun sin permiso de sus persona en la secretaria del provisor de la diócesis, ó
superiores. - - a se presentaba al primer oficial del distrito donde es—
Les era permitido tambien á los benedictinos de taban situados los beneficios. Segun aquel reglamen
San Mauro el aceptar las asignaciones de los benefi to, se debia agregará la declaracion la minuta del
cios de la antigua observancia, reservándose una poder del titular, cuya verdad debia certificar igual—
pension igual á la totalidad de las rentas; pero se mente con su firma; y todo se habia de entregar al es
mandó en un edicto del mes de abril de 1721 que cribano de la jurisdicion, real á donde pertenecian
ningun religioso de la estrecha observancia pudiese los beneficios: sin perjuicio de la ejecucion de lo de
aceptar bajo ningun pretesto la colacionó provision mas del edicto de 1719, que se renovó por un decre
de los prioratos conventuales, oficios claustrales ú to del gran consejo dado en forma de reglamento el
otros títulos de los monasterios de la antigua, sin ha 15 de abril de 1752.
ber obtenido los despachos conducentes y haberlos Denisart pretende que los benedictinos ingleses que
registrado en las audiencias; y aun se añadió que no tenian beneficios en Francia habian quedado libres de
se concederian estos sin haber tomado de antemano estas formalidades por una declaracion de 22 de agos
el parecer del abad de Cluni, superior general de la to de 1736; pero se engaño, porque la única diferen
Orden. cia que hay en este particular es de que los benefi
ciados ausentes fuera del reino podian suplirlas por
Precauciones que se tomaron en favor de los que
mano del prior del monasterio en donde estaban re
conferian beneficios de los indultarios, ó que tenian de
sidentes, el cual podia dar el poder que ellos mismos
recho á la vacante, y de los graduados. Habia otro in
conveniente que se oponia mucho al derecho que darian, dejándoles salva la facultad á los beneficia
tenian todos estos, que consistia en la dificultad de dos de reiterarlo tres, meses despues que hubiesen
vuelto. Para que un benedictino reformado pueda
saber el lugar de la residencia de los verdaderos titu
lares, é impedir que la corte de Roma usase de su trasladarse á otra casa de la antigua observancia ne—
derecho en la provision de ellos. Para remediarlo se cesita un rescripto de , Roma: así se resolvió por un
dispuso por el edicto del mes de noviembre de 1719 decreto del consejo de 22 de setiembre de 1728,
los titulares de los beneficios en la congregacion acompañado de los despachos del rey, registrados
e San Mauro que estuviesen en posesion de ellos an— en el gran consejo. Este rescripto debe ser presenta—
tes del edicto, por cualquier título que fuese, diesen do inmediatamente al superior general para que
su declaracion en persona, no solo al notario de los preste su consentimiento por escrito. Si el superior
provisoratos de la diócesis, sino tambien alsecretario lo rehusa, debe entablar la demanda el religioso an
de los jueces ordinarios ó senescales, en la que ma te la asamblea general; y si esta lo rehusase, acu
nifestasen la situacion de los beneficios, el sitio de su dirá al capítulo general próximo. Solo despues de ha
residencia actual, acompañando una copia de los tí ber pasado todos estos trámites podrá demandar an
tulos de posesion, las rentas del beneficio, el nom te el juez eclesiástico la ratificacion de las causas que
bre de los renteros y el de las diferentes parroquias espuso para su traslacion. -

en que se percibian los derechos y ecsistian los bie Privilegio de la casa de Cluni. La abadía y territo
nes pertenientes al beneficio. Se mandó igualmente rio de Cluni eran en lo antiguo nullius dioecesis. Ur
que se presentasen á dar esta declaracion cuantas ve bano Il habia fijado sus límites prohibiendo á cnal
ces mudasen de domicilio los religiosos beneficia uiera obispo el traspasarlos; sin embargo, el obispo
dos; y á fin de que no pudiesen hacer en secreto las e Macon quiso reclamar contra este privilegio en
resignaciones, permutas y colaciones en las casas de 1737, y rey, por decreto del consejo de 15 de
los benedictinos, se dispuso al mismo tiempo que no abril de 17, citado en la coleccion de jurispruden
podian tener efecto alguno en ninguna clase de be cia, sin atender á la demanda del abad de Cluni,
neficios, bien fuesen de la misma Orden ó de otra mantuvo al obispo de Macon en el derecho esclusivo
diferente, como no fueran acompañadas con los des de ejercer la jurisdicion episcopal en dicho pueblo
pachos correspondientes, registrados en forma; y que y su territorio... . -

si no los obtenian en término de tres meses, y hacian Cargas que tienen los abades y priores comendata
la declaracion que se les habia mandado, se impe rios. Al tiempo de la introduccion del titulo de en
trarian los beneficios como vacantes. Lo que se mo comienda de la órden de Cluni, hubo contestaciones
dificó algo por una declaracion posterior” de 1.° de acerca de las cargas que tenian los monasterios, las
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cuales se dispuso que las cumpliesen los primeros co Renedictinos, tenedietinas. Orden céle
mendatarios, lo mismo que los primeros priores re bre fundada por S. Benito. -

gulares con título; á no ser que prefiriesen perder la Mosheim que no se ha descuidado en desacreditar
tercera parte de las rentas. En el capítulo general las Ordenes monásticas, se ha visto obligado á con
celebrado en 1768, al que acompañan los despachos fesar que el designio de S. Benito fue que sus reli
del mes de abril del año siguiente, se previno que giosos viviesen piadosa y pacíficamente, y dividiesen
hasta dejar esta tercera parte se pagase una doble el tiempo entre la oracion, el estudio, la educacion de
porcion de la mesa abacial, ó una pension propor la juventud y demas ocupaciones piadosas y sábias.
cionada á los gastos estraordinarios que se presen Hist. del siglo, V1 segunda parte c. 2, S. 6. En
tasen. efecto tal es el espíritu y el plan de su regla. ¿Pero
Rehusó satisfacer esta pension un prior comen con qué atrevimiento este crítico pudo aventurar que
dalario, ofreciendo pagar seis pesetas diarias para ya en este tiempo la Irlanda,, la Galia, la Alema
contribuir á los gastos del que fuése nombrado dipu nia y la Suiza estaban pobladas de conventos llenos
tado al capítulo general, si no se querian conformar de monges holgazanes y perezosos, fanáticos y en
en eximirle de este pago por cincuenta libras todos tregados á la disolucion? Está probado por todos los
los años. De aquí resultó un pleito, en el cual el abad monumentos del siglo VI que los monges de Irlanda
Ozamna, prior de Lhions en el Santerre, fue conde— guardaban la misma regla que los de oriente: dividian
nado á pagar trescientass libras cada año, en vez de el tiempo entre la oracion, el estudio, las misiones,
las cincuenta º él ofrecia. por un decreto del gran el trabajo de manos, ó el cultivo de la tierra; que
consejo de 16 de mayo de 1735. El autor de la co— los monasterios eran otras lantas escuelas á las que se
leccion de Jurisprudencia observa que se dió otra acudia para instruirse; que un gran número de aba—
sentencia igual por el consejo en 6 de febrero de 17' des que los gobernaron y obispos que salieron de ellos
contra Dom Roger, en favor de Esbrayal, prior claus han sido colocados por los pueblos en el número de
lral de S. Martin de l.airac. los santos. Por esto fue por lo que S. Columbano in
De los diezmos. Por lo que hace á los diezmos, la trodujo en las Galias, en la Alemania y en la Suiza
Orden de Cluni tenia derecho á los novales, á propor la ¿ monástica. Está probado por las obras de este
cion de las antiguas: sobre ese asunto hay varios santo monge que tenia un talento muy cultivado, que
decretos y sentencias del parlamento que es inútil re estableció en los conventos ¿ fundó la misma disci
ferir ahora que las cosas se han arreglado por el plina que habia en los de Irlanda. Sus discípulos fue
edicto del mes de de mayo de 1768, que habla de las ron los que desbrozaron los yermos, en los cuales los
porciones cóngruas. eslableció S. Columbano, mientras que los feroces
Los benedictinos pueden recibir grados académicos. conquistadores destruian las Galias, y llevaban la de
Los religiosos de una y otra observancia tienen licen— solacion por todas partes. ¿En qué sentido estos pia
cia para estudiar en las universidades, recibir los dosos solitarios puede llamarse hombres ociosos, pe
grados, solicitar y poseer beneficios; mas los religio rezosos, fanáticos, ó dados á la disolucion?
sos reformados necesitan el permiso particular de los S. Benito y S. Columbano se hallaban animados de
superiores principales, pues no les basta el que lo un mismo espíritu, trabajaron bajo un mismo plan, y
tengan del superior local. Así se decidió, segun dice han obtenido los mismos resultados; no hubieran al
Denisart, contra Dom Bonet por una sentencia del canzado un éxito tan prodigioso si hubiesen sido tales
¿ consejo en 19 de diciembre de 1735, prohibién como quiere Mosheim pintar á los monges. ¿De qué
ole hacer uso de sus grados. hubieran vivido la multitud de solitarios que se halla
De los oficios claustrales. Al mismo tiempo que se ban reunidos si no hubiesen sido muy laboriosos? En
hizo la reforma se suprimieron los oficios claustrales tonces no se les daban ni tierras cultivadas, ni colo--
en la congregacion de San Mauro, y se reunieron nos que lo hiciesen; porque todos vivian en los de
á las mesas conventuales. Estos oficios subsistian en siertos. Pero los censores de la vida monástica pre
el resto de la Orden de San Benito; pero por una bu guntan ¿por qué renunciar á los negocios de , la so
la de 15 de julio de 1772, pedida a Papa Clemen ciedad, á los deberes y obligaciones de la vida civil
te XIV por el rey difunto, acompañada de cartas pa— para ir á pasar la vida en un desierto? Porqué?..
tentes el 1 de agosto del mismo año, registradas en por libertarse del saqueo de los tiranos y de los guer
debida forma, fueron suprimidos estos oficios; por reros que todo lo destruian, los que sin embargo res
consiguiente se dijo que todas las capellanías claus petaban á los monges cuya vida les admiraba, y cuyas
trales, empleos monacales y oficios de los conventos virtudes les imponian. Para vivir en la sociedad ci
que estaban á la sazon poseidos por regulares se es vil, si es que entonces habia sociedad, era necesario
tinguirian de derecho en llegando á vacar, fuese por ó cometer violencia ó sufrirla: almas apacibles y vir
muerte, por dimision, ó por otra causa cualquiera, tuosas no podian decidirse ni á uno ni á otro, por lo
sin poder ser obtenidos en lo sucesivo por título bajo que huian lejos de ella.
ningun pretesto; y que los derechos y rentas per— Mosheim pretende que con el tiempo los discípulos
tenecientes á ellos se reunirian é incorporarian para de S. Benitodegeneraron ignominiosamente de la pie
siempre á las mesas conventuales, ó en su defecto á dad de su fundador; que enriquecidos por la liberali
los prioratos y beneficios con titulo, con el cargo de dad de las personas opulentas se entregaron al lujo, á
cumplir las fundaciones que estaban anejas, á estos la intemperancia y á la ociosidad, se mezclaron en los
oficios aquellos que gozasen el beneficio de la reu negocios temporales, se introdujeron en las cortes,
nion de estas rentas. (Estracto del Diccionario de Ju— multiplicaron las supersticiones, trabajaron con ar
risprudencia.) dor para aumentar la arrogancia y la autoridad del
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sumo pontífice."Pero confiesa que S. Benito no po toda renta eclesiástica está inseparablemente unida á
dia preveer que se pervertiria hasta este punto el ob un oficio ó servicio cualquiera hecho á la Iglesia, se
jeto de su institucion, y que nunca autorizó estos gun el principio: Beneficium propter oficium. Es igual
abusos. -

que este servicio consista en oraciones, en trabajos

Hé aqui ya líbre de toda réplica al santo fundador apostólicos, en el desempeño de funciones de orden o
¿son tan culpables sus discípulos como se pretende? de jurisdicion; la obligacion de cumplir con ellas es
Desde luego se les acusa con una contradiccion; se les siempre indispensable para tener derecho á percibir
vitupera haber abandonado el mundo, y en seguida la renta que les está asignada. Esta renta no es una
el entrar en él, se les lacha de fanatismo por haber limosna que á nada obliga sino un salario; no es un
abrazado una vida pobre y laboriosa; de lujo, de in— beneficio simple ni una subsistencia gratuita, es un
temperancia, y de todo género de vicios, por haber sueldo, un honorario pagado á título de justicia.
prestado sus servicios á los príncipes que los llamaban Síguese de aqui 1." La obligacion de desempeñar
cerca de sí. ¿Qué debian hacer los monges? por sí mismo estas funciones cuando sea posible y no
Sabemos que degeneraron siguiendo el tiempo ¿pe por otro, y de consiguiente la residencia. 2." De dis
ro en qué tiempo y por qué? Cuando los señores des tribuir entre los pobres el sobrante de las rentas, es
pues de haberse ¿ de todos los bienes profa decir, lo que esceda de lo necesario para una cómoda
nos quisieron tambien usurpar los sagrados, despo— subsistencia, porque la intencion de la Iglesia es man
jaron los monasterios, vendieron las abadias, pusie lener á los que la sirven, no enriquecerlos. 3." Limi
ron en ellas á sus hijos y á sus hechuras, dispersaron tarse á la obtencion de un solo beneficio cuando basta
los monges, les quitaron la libertad de servir á Dios, para procurar una cómoda subsistencia.
de observar su regla, y vivir segun el espíritu de su Severa parecerá esta moral en comparacion de la
estado. Quisiéramos saber si las sublimes virtudes de práctica actual; pero nunca prescribirán contra la
sus acusadores se sostendrian mucho tiempo en se evidencia de los deberes de un beneficiado los abusos
mejante confusion. Antes de decidir si multiplicaron inveterados, las sutiles distinciones de los casuistas,
los monges las supersticiones, es necesario saber si to los pretestos de la codicia, el ejemplo ni la autoridad.
das las prácticas que á los protestantes les place llamar Estan fundados en la ley natural, en la ley divina, en
supersticiosas lo son efectivamente. No dudamos que las leyes eclesiásticas mas antiguas, y sobre todo en
reducidos los monges á la miseria, á la ignorancia y á las disposiciones del concilio de Trento. Si la Iglesia
la imposibilidad de instruirse, como tambien hayan reuniese la potestad coactiva á la autoridad legislati
empleado alguna vez algun fraude piadoso para im— va, obligaria ciertamente á los beneficiados á obser—
poner á los bárbaros, cuya capacidad y violencia te— var sus preceptos. -

inian: sin duda que hicieron mal, pero al menos su
crimen se halla disminuido por las tristes circunstan
cias en que se encontraban. Trabajaron en aumentar seglares, la vanidad del derecho de patronato, el or—
la autoridad de los soberanos pontífices en un tiempo
en que esta autoridad era absolutamente necesaria
para reprimir los atentados de la multitud de tiranos
que destruian tanto la Iglesia como la sociedad civil.
Si esto es un crimen á los ojos de los protestantes, no
lo es segun el dictamen de hombres sensatos.
Trataremos con mas estension esta materia en el
artículo MoMGE.
"Se ha establecido en Francia la Orden de S. Be—
No se debe culpar á la Iglesia porque los beneficios
simples se hayan multiplicado. La ambicion de los
gullo de los grandes que querian tener eclesiásticos á
sus órdenes, la molicie que encuentra el culto público
demasiado pesado, y prefiere su comodidad á la co
munion de los santos, devociones y restituciones mal
entendidas, etc., hé aqui las principales causas de los
abusos. Por mas que la Iglesia dé leyes, las pasiones
encontrarán siempre mas medios de eludirlas que la
autoridad mas activa pueda hallar para hacerlas ob—
Ser Va". -

nito. El abad Gueranger, ayudado de Mr. Bouvier, Hoy se disputa si por derecho natural y divino pue
obispo de Mans, reunió en 1833 cierto número de den ó no los ministros de la Iglesia pº bienes: en
sacerdotes en un antiguo priorato de benedictinos, el otro tiempo ponerlo solo en duda hubiera parecido
de Solesmes, cerca de Sablé. Se establecieron en él absurdo.
el 11 de julio en número de 10 individuos, tanto re En efecto, segun los principios de la equidad na
ligiosos como hermanos conversos bajo la reforma de tural, todo el que está dedicado al servicio del públi
S. Mauro. Gregorio XVI, por un breve de 1.º de se co debe ser mantenido por este, cualquiera que sea
tiembre de 1837, les dió una ecsistencia canónica es— la naturaleza de las funciones que está encargado á.
tabl ciéndolos en congregacion francesa en la Orden desempeñar; tal ha sido y es todavia el sentir de to
de S. Benito, supliendo á las antiguas congregaciones dos los pueblos del mundo; mas á nuestros modernos
de Cluni, S. Vannes, S. Hidulpho y S. Mauro. La jurisconsultos les ha parecido raronable dudar, si es
casa de Solesmes se erigió en Abadia, cabeza de la justo sostener, á los encargados de la direccion del
Orden en Francia, y Dom Gueranger recibió la dig culto divino, de dar lecciones de moral y de virtud,
nidad abacial con todas sus prerogativas, y el título de instruir á los ignorantes, de corregir á los peca
de superior general de la congregacion en Francia. dores, y de asistir á los pobres y á los enfermos. Pe
Despues se estableció otra casa en París ro no han vacilado en decir que los eclesiásticos es
lan obligados en conciencia á ejercer sus funciones,
Beneficio. Dejamos á los canonistas el cuidado se ha supuesto con razon que estan obligados á el'o
de investigar el origen, la naturaleza y las diferen por justicia, y cuando faltan á ella saben bien cchár
tes clases de beneficios, el modo de proveerlos y de de sele en cara. Mas siendo toda obligacion de justicia
clararlos vacantés etc., basta á un teólogo saber que recíproca, es dificil concebir cómo el público pueda
TOMO I, 37
 BIEN 246 3EN
estar esento de proveer á la sobsistencia de los que le Lactancio de morte perfec. c. 8. Julano se volvió á.
sirven. No es cierto tampoco que la subsistencia con ap0derar de ellos; pero despues de su muerte les fue
cedida á los ministros de la Iglesia sea una simple ron devueltos.
limosna, una limosna franca, como han querido lla A estas pruebas que nos parecen claras, se opone
marla ciertos canonistas. El pobre á nada queda obli 1.” que Jesucristo mandó á sus apóstoles desempeñar
gado por la limosna que recibe; es un don de la ca gratuilamente su ministerio, pues acabamos de ver
ridad, un socorro puramente gratuito, aunque man que al mismo tiempo les dá derecho á la subsistencia.
dado por la ley de Dios natural y positiva; al contra Vender funciones y dones sobrenaturales, ponerlos
rio, el sueldo, la retribucion, y el honorario que re precio, querer hacerlos pagar es una profanacion,
cibe un ministro de la Iglesia le imponen el deber ri es el crimen que S. Pedro reprendió á Simon Mago,
goroso de ejercer estas funciones en provecho espiri cuando quiso comprar de los apóstoles á peso de oro.
tual de los fieles; es por una y otra parte justicia y no el poder de dar el Espíritu Santo. Pero un sueldo, un
caridad. honorario, una subsistencia concedida á un hombre
Jesucristo, que vino al mundo, no para destruir ó que desempeña ciertas funciones, no es precio ni pa
cambiar el derecho natural, sino para darlo mejor á go de estas; el precio es relativo al valor de la cosa;
conocer, nada derogó en este particular, se limitó á el honorario está unido al cargo y á la persona; es
prevenir los abusos. Despues de haber concedicio á igual para todos los que ejercen tal función, aunque
sus ministros el poder de hacer milagros para probar su mérito personal, sus talentos y sus servicios sean
su mision, les dijo: dispensad gratis estos dones que muy desiguales. Aun cuando se diga que un médico
habeis recibido gratis. No lleveis para vuestros via yende la salud, que un abogado y un magistrado tra
ges ni oro, ni plata, ni moneda, ni provisiones, ves fican, con la justicia, que un militar pone en precio
tido doble, calzado, ni armas para defenderos: digno su vida, que un oficial público vende sus servicios,
es el operario de su salario. Mat. c. 10, y.8. No les etc., estas espresiones de desprecio que la malignidad
prohibe pues recibir su subsistencia, sino vender sus inventa, y los necios aplauden, no cambiarán la
funciones y hacerlas objeto de tráfico para enrique naturaleza de las cosas, ni envilecerán las respetables.
cerse. Les asegura que jamás les fallará esta subsis funciones de aquellos.
tencia. «Cuando os he enviado sin dinero, sin provi 2.” . Otra objecion es que Jesucristo prohibia á
siones y sin vestidos os ha faltado algo? No, le res sus apóstoles poseer nada; pero al mismo tiempo les
pondieron sus discípulos. Luc., c. 22, }.35. «No te dijo que todo operario es digno de recibir su subsis
nemos derecho, decia S. Pablo, de recibir nuestro tencia; impuso pues á los fieles la obligacion de su
alimento? Quién llevó jamás las armas á su costa? El ministrarla á los obreros evangélicos. El modo de
que cultiva la tierra y el que muele el grano, lo ha cumplir este cargo ha debido ser análogo á las cir—
cen con la esperanza de recoger el fruto; si hemos cunstancias. Enviados los apóstoles á predicar el
sembrado entre vosotros los dones espirituales, ¿es Evangelio á todas las naciones, no podian fijarse en
una gran recompensa recibir algunos temporales?.... una iglesia; pero en cada una establecieron pastores
los que están ocupados en el templo viven de las titulares, ¿ señalar una subsistencia fija y se
ofrendas, y los que sirven al altar participan del gura; hé aqui el origen de los beneficios.
sacrificio: por eso el Señor mandó que los que anun 3.° Se ha dicho que la retribucion debida á los
ciasen el ¿ viviesen del Evangelio; pero ¿? ministros de la Iglesia es mas bien una limosna, y que
jamás he usado de este derecho». I. Cor. c. 9, y.. la posesion de bienes raices cambiaria su naturale
En efecto este apostol trabajaba con sus manos, por za. Hgmos demostrado que es un honorario como el
no ser molesto á nadie. Act. c. 20, y. 3. Mas nun que se concede á los médicos, á los magistrados, á los
ca hizo de esto una ley estensiva á los demas predi militares y á todos los oficiales públicos; ahora bien,
cadores del Evangelio. Cuando los valdenses y wicle este no es una limosna.
fitas sostuvieron que no era licito á los ministros de ...” Se ha sentado como principio que la Iglesia
la Iglesia poseer nada, fueron condenados por los es un cuerpo fuera del Estado, y que de consiguiente
concilios generales de Letran y de Constanza; pero los no es hábil para poseer bienes. Como por la Iglesia
enemigos del clero han hecho siempre alarde de des entienden sin duda los eclesiásticos, no acertamos á
preciar las censuras de la Iglesia. - comprender cómo un cuerpo de ciudadanos ocupados
Aunque el modo de proveerá la subsistencia de los en servir al público, sujeto á las leyes civiles, que sos—.
eclesiásticos haya variado , aunque hayan tenido tiene parte de las cargas comunes por los servicios
unas veces las oblaciones, otras fondos, otras el diez que presta, pueda ser estraño al Estado. No es mas
mo, esto es indiferente, en nada cambia la naturale estraño que el cuerpo militar, y cuando nuestros re
za de su derecho. La disciplina se acomoda en este yes conceden áestos, feudos, que equivalen á un suel
punto como en todos los demas, á las circunstancias, do, no vemos en qué hayan derogado el derecho na
á las revoluciones, á las necesidades y á los inconve tural. Aun cuando el clero fuera un cuerpo de estran
nientes que pueden sobrevenir; la ley natural y la jeros, cómo se probaria que son inhábiles para poseer
ley divina positiva quedan inmutables. Hay prue fondos, si prestan un servicio contínuo, y el soberano
bas evidentes de que antes del siglo IV y antes de y la nacion le han asignado estos fondos para cumplir
la conversion de los emperadores, ya tenian fondos con la obligacion natural de sustentarlo? Los regi
las iglesias cristianas, puesto que fueron confiscados mientos estrangeros tienen menos derecho á su suel
por Diocleciano y por Maximiano el año 302; se los do que los nacionales?
restituyeron en virtud del edicto de Constaptino y de 5." Para probar que la Iglesia es incapaz de po
Licinio en 313. Eusebio vida de Const., l. 2, c. 39; seer, han observado que no puede enajenar sus fon
 BEN 27) BEN

dos, que la propiedad le es inútil; que el Soberano y dido medio: y por ellos se determinaron los sobera
la nacion son los verdaderos propietarios de los bie nos y las naciones á asignarles fondos. Con la deca
nes de la Iglesia. Sin meternos en disputas sobre la dencia de la casa de Carlomagno, el clero fué insen
naturaleza de las diferentes clases de propiedad, nos siblemente perdiendo, porque los señores se apode
basta probar que los eclesiásticos tienen por derecho raron de los bienes de las iglesias, y el pueblo, pri
natural el usufructo perpétuo de los bienes de la Igle vado de los socorros espirituales, se ¿? precisado á
sia, puesto que su servicio es perpétuo. El derecho de recurrir á los monges ó á mantener á los eclesiásticos
enagenar estos bienes seria directamente contrario al á su costa.
objeto para que se diesen, que es subvenir á una ne En la peste negra del año 138, la mayor parte de
cesidad perpétua, y llenar una obligacion de justicia los moribundos que habian visto perecerá su familia
que nunca cesa. Esta especie de propiedad no es inú entera y á sus herederos, dejaban sus bienes á las
til, puesto que pone á los ministros de la Iglesia á cu iglesias á los hospitales, ó á monasterios; y á quién
bierto del peligro de carecer de subsistencia, y los tenian obligacion de dárselos? Si nos fuese permitido
obliga á usar mejor unos bienes, cuya posesion es— copiar las reflexiones que mas de una vez se han he
tan seguros de no perder. Nos parece absurdo atri cho á los reformadores de la disciplina actual, les di
buir á la nacion ó al Soberano una pretendida pro riamos: 1.° Que interesa al Estado que haya grandes
iedad, de que solo pueden hacer uso legítimo para propietarios, porque estan en posición de hacer gran
investir al sucesor del mismo derecho que su prede des adelantos para mejorar las propiedades. 2.º Que
CeSOT. es conveniente que los bienes cambien alguna vez de
6." Algunos han dicho que al menos en Francia, mano, porque entre muchos poseedores es facil ha
los eclesiásticos no pueden, poseer fondos, porque llar alguno que mas tarde ó mas temprano repare la
nuestros reyes dotaron las iglesias. Se dice en el pri— negligencia de sus predecesores. 3.° Que los bienes
mer concilio de Orleans celebrado el año 507, cánon dados al clero son un testimonio de los servicios que
1 y 5, que Clodoveo dió tierras á, las iglesias, y que ha prestado á los pueblos, sobre todo en tiempos ca—
concedió á los clérigos la inmunidad real y personal. lamitosos. Los que han leido la historia eclesiástica
En su consecuencia el concilio dispone el uso que de saben que las iglesias han sido enriquecidas por los
ben hacer de las rentas. soberanos y por los obispos, que al dedicarse al servi
Mas si Clodoveo dió tierras á las iglesias, entonces cio de alguna de ellas, la daban su patrimonio; por
son las iglesias las propietarias; porque de otra mane ricos particulares que morian sin herederos forzosos;
ra el don seria ilusorio. Del mismo modo cuando nues por señores á quienes la conciencia acusaba de malas
tros reyes han concedido feudos á los militares, estos, adquisiciones, y no podían repararlas de otro modo.
no otros, han sido los que los han poseido. Antes de Ninguno de estos medios de adquirir es ilegítimo. ...º
lodoveo habia en Francia iglesias fundadas con mas Siempre que los bienes eclesiásticos han sido usurpa
de trescientos años de anterioridad, y ministros para dos, ni el estado, ni los pueblos se han aprovechado
servirlas: tenian, pues, rentas, cualesquiera que ellos de este despojo; siempre han sido presa de los gran
fuesen para subsistir. La mayor parte de las iglesias des. Se empieza siempre este despojo por formar pro
fueron saqueadas y arruinadas por los bárbaros; y yectos y planes sublimes; luego que se hace la re—
Clodoveo conoció la necesidad de devolverlas lo que particion, cada uno guarda la parte de que se ha apo
las habian quitado, ó su equivalente. La distribucion derado, y las miras de interés público se desvanecen
de las rentas mandada por el concilio prueba tam como el humo. Asi sucedió en Francia en el siglo IX,
bien que los obispos eran considerados como legíti en el XVI en los paises del Norte y en Inglaterra, y
mos poseedores. en nuestros dias en Polonia, Alemania y en otras
Si los enemigos del clero fuesen mas instruidos no partes. V. FUNDActoN.
discurririan tan mal: sabrian que al principio del si— 2 =S" , «Viviendo los monges con sencillez y fru
glo VI el número de habitantes estaba reducido lo galidad, dice el abate Pey, lograron trasformar en
menos á la mitad del que habia sido en el reinado de hermosas, campiñas vastos desiertos abandonados, y
Augusto en las Galias y en todo el imperio romano: á fuerza de sudores quedaron convertidos en un ma
los demas perecieron por las devastaciones de los bár nantial de riquezas para las provincias. Los pobres
baros, por las guerras civiles entre los diversos pre— acuden alli seguros de hallar socorro ocupándose en
tendientes al imperio, por el mal gobierno de los em— trabajos útiles. Con estos ausilios se aumentó la pobla
peradores y por la peste, resultado ordinario de la cion; y poco á poco alrededor de estos monasterios,
uerra: de consiguiente, entonces lo menos la mitad se formaron los pueblos y las ciudades; viniendo á
e las tierras estaban sin cultivo... Aun consultando será un mismo tiempo las riquezas de los monaste
solamente el interés político, Clodoveo no pudo tomar rios un beneficio para los ciudadanos y un bien posi
medida mas acertada que conceder una parte á los tivo para el Estado». El juicioso é ilustrado traduc
eclesiásticos para que les diesen valor; independien tor de la obra de que estan copiadas estas palabras,
temente separada de los motivos de religion, la in— y que despues citaremos, añade una interesaute nota
munidad que les concedió estaba apoyada en la mis que por su oportunidad y sensatez merece ser tomada
ma razon que la declaracion del rey Luis XVI del á la letra. «En estos tiempos, dice, se ha querido
año 1776, concediendo veinte años de esencion á las enseñar lo contrario, suponiendo que las casas reli
tierras nuevamente cultivadas. giosas perjudicaban á la riqueza territorial. Pero cuán
Mejor seria, dicen, que los ministros de la Iglesia vano y gratuito sea esto, lo demuestra una esperien
se sostuviesen con pensiones. Pero desde los primeros cia, bien triste por cierto Ocupóse cuanto pertenecia
siglos se conocieron los inconvenientes de este preten al clero regular, y otro tanto se hizo con lo del secu
 PN 28 BER

lar. ¿Y qué ventajas ha traido esto para el Estado? todos eslan contentos consigo mismo, y ninguno tie
Ojalá que no se hubiesen acrecentado sus males ne derecho para estar descontento de Dios. Pero sus
Creemos que pueda producirse aqui como imparcial beneficios son nulos para los que no conocen su pre
el juicio del Sr. ministro de Ilacienda. Pues véase có cio; lo que nos bace dichosos es la sabiduria, el reco
mo se esplicaba ante el Senado en la sesion del 31 de nocimiento y la buena condicion, y no las riquezas.
marzo de 185, hablando de los malos efectos que Los vagos deseos de mejor suerte son un estravio de
habia producido la venta de los bienes dichos —«Es la imaginacion; casi siempre tendriamos motivo de
tan exaclo esto, señores (son las palabras del señor arrepentirnos, si Dios oyese nuestros votos. Los bene—
Ministro), que tengo en mi poder los documentos de lo ficios sobrenaturales son todos los medios interiores
que han producido los bienes del clero regular; y nos y esteriores de alcanzar la salvacion. V. GRACIA.
encontramos con que dentro de un año se hallan ya Lo esencial es saber respecto de los unos y de los
los productos de su venta consumidos, y cargada la otros, que la bondad infinita de Dios no nos da dere
nacion con 50 millones de reales para mantener al cho á exigir que nos los conceda mas abundantemen
clero regular, sin ventaja para él; asi que, señores, te que lo hace; que su justicia no consiste en conce
realmente mas males ha acarreado que bienes». Otro derlos igualmente á todos, sino en no pedir cuenta á
señor senador aseguró en la misma sesion, que las cada uno mas que de lo que le ha dado. Bien com
enagenaciones de los bienes eclesiásticos, lejos de pro prendidas estas dos verdades evitarian muchas que
ducir un alivio á los gastos públicos, habian causado jas injustas á la mayor parte de los hombres, y al
en ellos un recargo enorme; de 18 á20 millones, dijo gunos falsos razonairientos á los filósofos. V. BoNDAD
otro señor senador, ser la deuda de la nacion.—Lo Just ICA, lo;UALDAD. -

mismo sucedió en Inglaterra; lo propio acaeció en

Francia; y Federico de Prusia dijo que las rentas y IBerengarios. Sectarios de Berenger. Era este
productos de los bienes eclesiásticos que habian en arcediano de Angers y despues fué tesorero y maestre
trado en su tesoro habian sido una carcoma que con cscuela de S. Marlin de Tours, ciudad en que habia na
sumió las demas. Pueblos, ved aqui la mejor respues cido. Se atrevió á negar la presencia real de Jesucris
la contra lar teorías encantadoras con que muchas ve lo en la Eucaristia; hácia el año 107 fué cuando em
ces se procura abusar de vuestra sencillez». La ley pezóá dogmatizar. Condenado sucesivamente por mu
oral esplicada y perfeccionada por la ley evangéli chos pontífices y por cinco ó seis concilios, Berenger
ca, p. 262 y 63. se retractó de sus errores, firmó tres profesiones de fé
católica, y otras tantas veces volvió á sus errores. Sin
Beneficios de Dios. La Sagrada Escritura embargo, se cree que murió sinceraniente convertido
nos dice que Dios ha bendecido todas sus obras, que y desengañado de ellos. Algunos autores dicen que
á, ninguna de sus criaturas desprecia, que es bueno y condenaba los matrimonios legítimos, y que sostenia
bienhechor para con todos los hombres, y que sus mi que las mugeres deben ser comunes; que tambien re
sericordias alcanzan á todos sin escepcion. Génesis, probaba el bautismo de los niños; pero estas dos acu—
c. 5, y. 2: Sap. c. 11, y. 25; Ps. 1 ... y 9. Esta es saciones no estan probadas.
una verdad de la que nos importa estar bien conven Lanfranc y Guitmond se distinguieron entre muchos
cidos. obispos y abades que escribieron con acierto contra él.
Es necesario distinguir los beneficios de Dios en el Este último espone las opiniones y variaciones de los
órden físico y en el moral: estos últimos son: ó natu berengarios sobre el sacramento de la Eucaristía de la
rales, ó sobrenaturales. Todo lo que puede contribuir manera siguiente: «todos, dice, convienen en estable
al bienestar de una criatura sensible en el órden físi cer que el pan y el vino no cambian esencialmente;
co es sin duda un beneficio. Ilaciendo abstraccion de pero difieren en que unos dicen que nada tiene del
la multitud de seres deslinados para nuestro uso en cuerpo y la sangre de Jesucristo, y que el sacramento
el universo, hay beneficios personales concedidos á no es mas que una sombra y figura, al paso que los
cada uno en particular, como órganos sensitivos bien otros, cediendo á las razones de la iglesia sin abando—
conformados, un temperamento robusto, una salud nar su error, dicen, que el ¿? la sangre de Jesu
constante, un caracter siempre igual, etc.; sin esto, cristo eslan efectivamente contenidos en el sacramento
el hombre no goza, sino impérfectamente de los seres aunque oculos bajo una especie de empanacion para
criados para él. Un talento recto, y esacto, pasiones que podamos tomarlos; pretenden que esta era la opi
moderadas, inclinacion natural á la virtud, son en el nion mas sutil del mismo Berenger; otros creen que el
órden moral veñlajas inapreciables. pan y el vino son cambiados en parte; algunos sostie
Estos dones están repártidos entre los hombres con nen que son cambiados enteramente, pero que cuando
mucha desigualdad, quizá no exislan dos individuos los que se presentan á recibirlos son indignos de ellos,
que los posean igualmente; los temperamentos se di— la sangre y la carne de Jesucristo vuelven á tomar la
ferencian tanto como los rostros; pero no existe na naturaleza del pan y del vino. Guimond, contra Be
die que mas ó menos deje de participar de los bene— reng Bibliot. PP. p. 327.
cios de Dios en el órden físico y en el orden moral. Por esta esposicion se ve que los berengarios fueron
Cuando se consideran con reflexion, su desigualdad los precursores de los luteranos y calvinistas en sus
no es tan grande como al pronto parece: Dios ha dis— errores sobre la Eucaristía, que los unos y los otros se
tribuido y, compensado sus dones de tai modo que han encontrado en el mismo apuro, al tergiversar el
nadie tiene derecho á quejarse. Cuál es el hombre sentido de las palabras del Evangelio. Por la conduc
sensºto que querria cambiar su existencia en su tota ta observada por la Iglesia con los primeros, es facil
lidad por la de otro hombre cualquiera? En general conocer cuál era entonces la creencia católica y uni
 - BER 249) BER
versal, y si ha sido la Iglesia ó los protestantes los que miramientos que sus predecesores, le acusa Mosheim
quinientos años despues la han innovado. de haber abrazado la misma opinion; mas nos es fa
Todos los escritores del siglo XI que han com cil probar lo contrario. S. Gregorio asistió en calidad
batido á Berenger prueban que la doctrina de este de legado, antes de ascenderal pontificado, al concilio
era una novedad; que nadie hasta entonces la habia de Tours celebrado el año 105, en el que Berenger
sostenido, á escepcion de Juan Scoto Erígenes que la abjuró sus errores. En un concilio celebrado en Roma
sostuvo en el siglo IX, y qte fue condenada apenas en el año 1059, y al que asistieron trece obispos en
se manifestó: tambien la anatemalizó el concilio de el pontificado de Victor II., Berenger hizo profesion
Letran al que asistieron ciento trece obispos, el año de fé segun la cual creia que el pan y el vino ofreci—
de 1059. dos en el altar son despues de la consagracion, no solo
A pesar de los esfuerzos que han hecho los berenga un sacramento, sino el rerdadero cuerpo y la rerdadera
rios para propagar su doctrina en Francia, en Italia sangre de nuestro Señor Jesucristo; que las manos de
y en Alemania, los autores contemporánees dicen que los sacerdotes tocan este cuerpo no solo en forma de
tenian pocos secuaces, y no quedaba ninguno cuando sacramento sino real y verdaderamente. Mosheim dice
aparecieron Lutero y Calvino. Aunque el siglo XI no que esta doctrina era absurda é insensala. Un conci
sea de los mas adelantados, no es creible lo que dicen lio de Rouen declaro en 1063 contra este mismo he
los protestantes que Berenger fuese muy mal refutado reje, que en la consagracion se transforma el pan por
y solo tuviese por adversarios á los monges. Escri el poder divino en la sustancia de la carne nacida de
bieron contra él los obispos de Langres, de Lieja, de la Santísima Virgen, y el vino se cambia verdadera y
Angers, de Brescia, y el arzobispo de Rouen; sus sustancialmente en la sangre derramada por la reden
obras subsisten todavia; el tratado del cuerpo y la cion del mundo.
sangre del Señor, por Lanfranc, arzobispo de Cantor— En un concilio celebrado en Roma en el pontificado
bery; el de Guitmond, obispo de Aversa, cerca de Ná de S. Gregorio VII el año 1078 confesó Berenger, bajo
poles y el del sacerdote Alger, escolástico, de Lieja, la fé del juramento, que el pan puesto sobre el altarse
con el inismo título, son obras sábias y sólidas. Eras convertia por la consagracion en el rerdadero cuerpo
mo las tenia en mucha estima y las preferia á todos de Jesucristo y el rino en la rerdadera sangre que ha
los escritos de controversia que sobre el mismo asun— bia salido de su costado. De aqui deduce Mosheim que
to vieron la luz en el siglo XVI. Berenger conoció Gregorio VII desechó la confesion de 1059, y la re
que no podia contestarlas, y se vió obligado á confe vocó aun cuando fué solemnemente aprobada por un
sar su derrola. Las cartas y fragmentos que nos que pontífice en un concilio. Es evidente sin embargo que
dan de sus obras no nos dan grande idea de susta esta segunda fórmula no se diferencia de la primera
lentos y mucho menos de su buena fé. sino en que espresa con mucha claridad la transus
En las vidas de los Padres y de los mártires, dia 19 tanciacion.
de abril, se halla una noticia esacta de la vida y de los Berenger confesó al año siguiente en otro concilio,
errores de Berenger, y de las obras que se escribie— que el pan y el rino por la oracion y por las palabras
ron contra él. Aun se encuentran datos mas estensos de nuestro Redentor eran cambiados sustancialmente
en la hist. de la iglesia galic. t. 7, l. 20 y 21. en el rerdadero y propio cuerpo de Jesucristo; estas
La manera con que Mosheim habla de ellas, hist. son las mismas palabras que las del concilio de Rouen,
ecles, del siglo XI, parte 2." c. 3, S. 17 y siguientes, Mas Berenger fue tan consecuente en esta protestacion
prueba á qué escesos puede conducir el espíritu siste como en las dos anteriores.
mático á un hombre por otra parte ilustrado. Desde Como Gregorio VII no entabló nuevos procedimien
luego dice que Berenger era conocido por su saber y tos contra Berenger, deduce Mosheim que no detes
por la santidad ejemplar de sus costumbres; no ha taba su perfidia, y que probablemente pensaba como
podido menos de adulará un herege. Pero el saber de él. Por la misma razon podria decir tambien que los
Berenger está muy mal probado por lo que nos queda obispos de Francia abrázaron el partido de Berenger
de sus escritos, y tres perjurios seguidos no dan me— puesto que apesar de su tercera recaida no pronun
jor idea de su santidad. ciaron contra él nuevos anatemas, contentándose so
Dice Mosheim, que antes de este siglo no ecsistia lamente con refutar sus errores de una manera que le
ninguna decision de la Iglesia sobre el modo con que redujo al silencio.
Jesucristo estaba en la Eucaristía, y que cada uno En un escrito de Berenger aparece que Gregorio VII
creia lo que le parecia. Si esto fuere cierto, probaría le dijo: no dudo que tendreis buenos sentimientos en
que Berenger fue muy temerario al querer esplicar un cuanto al sacrificio de Jesucristo conforme á las Escri
misterio que todos se habian contentado con creer sen turas; de aqui infiere Mosheim que este pontífice se in
cillamente, sin tratarde comprenderlo. Pero la verdad clinaba á la opinion de este hereje. Pero esta opinion
es, que hasta entonces la Iglesia católica habia crei era verdaderamente conforme á la Sagrada Escritura,
do en la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía, y segun esta opinion, la Eucaristía podia llamarse un
como lo prueban todos los que escribieron contra Be sacrificio? Hé aqui cómo ciega el espíritu de partido.
renger. Lo que escribió Juan Scoto Erígenes en el si Mosheim pone en ridículo á los escritores católicos
glo IX contra esta verdad, no tuvo éxito ni secuaces. que han afirmado la conversion de Berenger; pero él
Nunca se atrevió á decir el mismo Berenger que de mismo da pruebas de ella. Dice que este personage
fendia el sentimiento general de los fieles, y que los dejó al morir grande opinion de sanlidad; y ¿la habria
obispos que le condenaban eran novadores. Ningun es dejado si todavia hubiese sido hereje? Dice que los ca
critor de su siglo se aventuró á hacer su defensa. nónigos de Tours honran todavia su memoria con un
Porque S. Gregorio VII trató á Berenger con mas sufragio que hacen todos los años sobre su tumba: se
 BER 28ol BER
guramente no lo harian si no estuviesen persuadidos do de admitirla en el número de los libros sagrados
que cuando murió estaba en la comunion de la Iglesia. canónicos; pero esta deduccion no es infalible. S. Ber
Dice por último que Berenger en su obra pide perdon nabé no era del número de los apóstoles elegidos por
á Dios por el sacrilegio que cometió en Roma siendo Jesucristo, sino uno de los 72 discipulos; es muy pro
perjuro: esto no prueba que todavia perseverase en hable que Hermas y S. Clemente tuviesen la misma
sus errores. El monge Clarió, Ricardo de Poitiers, eldistincion; sin embargo sus escritos no han sido co—
autor de la Crónica de S. Martin de Tours, Guillermo locados ciertamente entre los libros sagrados. La carta
de Malmesbury prueban que Berenger murió arre de S. Bernabé era dirigida á los judios, lo mismo que
pentido y convertido. Este testimonio de los contem la de S. Pablo á los hebreos, y esta última ha dado
poráneos valemas que las vanas conjeturas de los pro lugar á disputas. Los defectos que los críticos moder—
lestantes. nos quieren encontrar en esta carta han podido hacer
Mosheim parece que copió todo lo que dice de Be tambien impresion sobre los antiguos, é impedirlos
renger, de la historia de la Iglesia por Basnage, lib. 2, colocarla en el lugar de los libros canónicos. Bueno
c. 2. En ella se encuentran los mismos hechos y las será saber lo que contiene.
mismas reflexiones. Todo está fundado en las aser El autor, dicen, cita varios pasages que no se ha
ciones de este heresiarca, convencido cien veces de llan en la Escritura; segun él todos los sirios, los ára
impostura y de calumnia. bes y todos los sacerdotes de los ídolos reciben la cir
cuncision: el mundo se concluirá en el espacio de seis
. Bernabé (San). Es llamado apóstol por los Pa mil años y Jesucristo subió al cielo el domingo. ¿Es—
dres de la Iglesia y por el mismo S. Lucas. Act. c. 1, tas réplicas son bastante fuertes para que no se pueda
y. 13, aunque no fue del número de los 12 que Jesu atribuir á S. Bernabé la carta que lleva su nombre?
cristo habia escogido, sino uno de los 72 discípulos que En el cap. 7 cita un lugar del libro de los Números
el mismo Salvador habia instruido y enviado para con respecto al cabron emisario, y añade palabras que
predicar el Evangelio. Luc. c. 10, y. 1 y 17; fue sin no estan en este libro, pero que espresan una circuns
embargo el compañero de S. Pablo en los viajes y en tancia de esta ceremonia tal como la hacian los ju
los trabajos. Tuvo una gran parte en todo lo que hi dios. ¿Dónde está el error? Los judios no podian ser
cieron los apóstoles para establecer el cristianismo. engañados en esto.
Nos queda de él una epístola que se ha puesto á la En el cap. 12 cita á un profeta, que no nombra, y
cabeza de los escritos de los Padres apostólicos de la se cree hallar lo que dice en el libro º de Esdras que
es apócrifo. Pero esta cita puede tambien haber sido
edicion de Cotelier, cuyo principio se ha perdido. Iba
dirigida á los judios convertidos, que pretendian quesacada de algun otro libro profético que ya no exis
las observancias legales eran aun necesarias para la ta. Para que S. Bernabé haya podido citar á los judios
salvacion á todos los que creian en Jesucristo, aun el ..." libro de Esdras, bastaba que estos lo hubiesen
que los apóstoles hubiesen decidido lo contrario en el
respetado como profético; pero no se sigue que el mis
concilio de Jerusalen. Act., c. 15. S. Bernabé en la mo S. Bernabé lo haya considerado como tal. Este se
primera parte de su carta demuestra que la ceremo— ria un argumento personal muy bueno para los judios.
nias mosáicas se habian abolido por la nueva ley; en Ló que dice de la circuncision de los sirios, etc., c. 9,
la segunda dá escelentes lecciones de moral ie la está confirmado no solo por Orígenes y otros Padres,
humildad, la dulzura, la paciencia, la caridad, la cas—
sino aun por los autores profanos., Veanse las notas de
tidad, etc. Se hallan en ella mucha erudicion hebrái Cotelier y de Menardo sobre este lugar.
ca, grandes conocimientos de las Escrituras y esplica Lo que añade, c. 15, sobre la duracion del mundo
ciones alegóricas como las que estaban en uso entre y su fin despues de seis mil años, era una tradicion ju
los judios. dáica, falsa sin duda, que S. Ireneo y otros Padres la
Ha sido citada esta epístola con el nombre de San han dado crédito. S. Bernabé la pudo citar sin estar
Bernabé por S. Clemente de Alejandria , por Oríge muy convencido de ella.
nes, Eusebio y S. Gerónimo. Los dos primeros pare En cuanto al lugar perteneciente al dia de la As
ce la colocan en el rango de las Escrituras canónicas; cension, nos parece que se comprende mal su sentido;
concediéndole la misma autoridad los dos últimos, di se dice en el c. 15: «Celebramos con alegria el 0ctavo
cen que es apócrifa. Es preciso no deducir de aqui, dia en que Jesucristo resucitó, y despues de haberse
como lo han hecho algunos modernos, que Eusebio y dejado ver subió al cielo.» Esto no significa que subió
S. Gerónimo estaban persuadidos de que esta carla no al cielo el dia mismo que resucitó.
era de S. Bernabé, ó que dudaban de ello, sino que Se disimulan estos defectos, dice Tillemon: ¿pero
solamente la han escluido del número de los libros ca no vale mas no verse precisado á escusar estas faltas
nónicos. Llaman apócrifos no solo á los escritos atri en un apóstol? Si estos son defectos, no comprometen
, buidos falsamente á los apóstoles ó á los discípulos de la fé ni las costumbres, y no vemos que sea ¿ 10
Jesucristo, sino tambien á los que se han colocado sin io
el suponer que S. Bernabé debió estar libre de
fundamento por algunos antiguos en el número de los elloS.
libros sagrados. Esta es una equivocacion de la cual El autor de la memoria sobre los libros apócrifos,
han abusado los críticos protestantes, y es necesario Hist. de l' Acad. des Inscript., tom. 3, en 12.° y el
no deiarse llevar de ella. del eacámen crítico de los apologistas de la religion
Tillemont y otros, prevenidos por esta preocupa cristiana, que ha considerado el juicio de Tillemont
cion, dicen, que si esta carta se hubiese reconocido como irrefragable, deberian haber examinado la
ser verdaderamente de S. Bernabé, la Iglesia, que cuestion mas de cerca.
honra á este santo como un apóstol, no hubiera deja El sabio Lardner, que ha leido todo lo que se
º
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ha escrito en pro d en contra, cree que esta carta es falsamente el éxito de la segunda cruzada. Como el
verdaderamente de S. Bernabé, que fué escrita in mismo S. Bernardo hizo su apología sobre este par
mediatamente despues de la ruina de Jerusalen y del ticular, está de antemano refutada esta acusacion.
Templo, el año 71 ó 72 de Jesucristo. Credibility of Solamente añadiremos que si los enviados hubiesen
the Gosphel history, tom. 3, lib. 1, c. 1. observado mejor los consejos del santo abad, la cru
zada hubiera tenido un éxito mas feliz Véase CRu
IBernardas. (Derecho eclesiástico.) Llámanse zADA. Dicen tambien que tenia poca ciencia, que
aslas religiosas instituidas por los monges de la Orden mezcla confusamente la Sagrada Escritura, los cáno
del Cister. Su casa matriz es la abadia del Tard en la nes y los concilios, y que es fecundo en alegorías.
cíudad de Dijon; su gobierno es casi el mismo que el Pero S. Bernardo era muy sabio para aquel siglo,
de la Orden de su filiacion. Antiguamente celebraban puesto que poseia la Escritura Sagrada y los cánones;
no es culpa suya el haber nacido en un tiempo lla
sus capítulos generales, como los tienen aun las reli— mado
giosas del Cister; pero por varios inconvenientes que cion; siglo de barbárie, de ignorancia y de supersti
ocurrieron no se continuaron. La abadesa de Tard no ha sido culpable de ninguno de estos tres vi
era, respecto de las demas religiosas de la Orden, lo cios. En cuanto á las alegorías, hace menos uso de
que el abad del Cister es con respecto á los religiosos ellas que los antiguos Padres: solo las emplea en las
que están sujetos á él. Están bajo la jurisdicion espi obras morales y piadosas, y nunca en sus escritos
ritual y temporal de aquellos monges. Por una decision dogmáticos; pero no funda en ellas la creencia cató
del gran consejo del 1 de agosto de 1750 se prohibe á lica cuando la defiende contra los hereges.
las abadesas y superioras de dicha Orden el hacer prés En general no se puede negar á este Padre talento
tamo alguno sin deliberacion prévia de la comunidad vivo y penetrante, bella imaginacion, estilo dulce
reunida en capítulo, y sin que lo autoricen los supe— éuninsinuante,
celo
elocuencia persuasiva, tierna piedad,
ardiente, pero ilustrado por la pureza de la
riores principales. Se confiesan con los religiosos de fé y por la observancia de la di en fin, vir
la misma, los cuales no necesitan de aprobacion
del obispo diocesano para cumplir con sus fun— tudes muy superiores al espíritu de su siglo.
También se le acusa de haber perseguido á Abe
ciones; pero en cuanto al exámen de las religio—
sas novicias, está el obispo en posesion de hacer en lardo por envidia; ya hemes refutado esta calumnia
el artículo ABELARDo. Para formarse una idea
lo, por haberle mantenido en este derecho á pesar de exacta
todos los privilegios de la Orden del Cister. Las aba— abad dedeClaraval,
los talentos y de las virtudes del santo
es necesario consultar la historia
desas están, bajo la autoridad del abad general de
Cister: á él compete el bendecirlas ó dar comision de la Iglesia Galic., t. 9, l. 25 y 26.
á otro abad para que lo haga; y al mismo tiempo de
la bendicion las abadesas espresan particularmente X Isernardos. (Derecho eclesiástico). Seda este
quedar sujetas á la obediencia del general. En su mo nombre á los religiosos de la Orden del Cister, pero no
ñasterio tienen una autoridad particular, y por un de se deben confundir con otros religiosos llamados tam
creto del real consejo de 10 de julio de 1702 se re— bien asi, de los cuales hablaremos en el artículo si
solvió que tenian derecho de instituir y destruir las guiente. Se dió este nombre álos cistercienses por cau
oficialas de la abadía, y al mismo tiempo declara co— sa de S. Bernardo, primer abad de Claraval, que fue
mo un abuso el que se haga la eleccion de las que uno de los mas ilustres abades de esta Orden, cuyas
tienen oficio por la comunidad. El mismo tribunal virtudes y talento le adquirieron una gran reputacion
decidió asi mismo que cuando hubiese que entablar en toda ella.
alguna demanda concerniente á la clausura, y á la En lo antiguo, los benedictinos de que hemos ha
ejecucion de otras cláusulas de un breve de Alejan blado y los actuales Bernardos, constituian una misma
ro VII, espedido á las religiosas de esta Orden, se Orden bajo la regla de S. Benito. Despues se dividió
dirigiesen estas al abad general del Cister. este cuerpo en dos raamas cuando se trató de una re
Las Bernardas tienen los mismos privilegios y esen forma que unos abrazaron y otros no quisieron adop
ciones que los monjes de su misma Orden, tienen que tar. V. BENEDICTINOS.
recurrir al gran consejo por las causas de devolucion La Orden del Cister, de que vamos á tratar, tuvo
6 confiscacion: lampoco pagan diezmos, porque asi su origen en la abadía de este nombre, situada en
lo decidió este tribunal el 29 de marzo de 172 con Borgoña, diócesis de Chalons, y fundada en 1098 por
tra los jesuitas de Tournon y Puy, declarando que las el duque de Borgoña. El primer abad de esta Orden
religiosas de la abadia Clavas, no debian pagar el fue S. Roberto, que vino de la abadía de Molemo con
diezmo de la cuarta que ellas recibian en la recolec - algunos religiosos á fundar un nuevo monasterio, su
cion de sus tierras cultivadas en porciones por los co— cediéndole en el año 1100 S. Alberico. En tiempo de
lonos de la parroquia del Riotorio. (Estracto del dic— este abad los religiosos del Cister resolvieron que no se
cionario de Jurisprudencia.) fundase ninguna abadía de su instituto hasta que el
obispo diocesano desistiese de las pretensiones de au
nernardo, (san) abad de Claraval. Murió en toridad y jurisdicion que queria ejercer sobre los mo
el año 1153, y es, segun el orden de los tiempos, el nasterios que se fundasen. S. Alberico tuvo por suce
último de los Padres de la Iglesia. La mejor edicion sor á S. Esteban en el año 1107, y á este tercer abad
de sus obras es la que hizo Dom Mabillon en 1690, reconoce la Orden por su verdadero fundador. En su
que fué reimpresa en 1719 en dos volúmenes en folio. tiempo se hicieron, de comun acuerdo con los religio
Ningun error le han podido atribuir los filósofos sos, los reglamentos y estatutos que debian servir
incrédulos; pero le han acusado de haber profetizado para siempre á los monasterios que habia entonces, y
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á los que pensaban fundar. Dichos reglamentos y es— el primero. Le disputaron el derecho de visitar los
tatutos son conocidos bajo el nombre de carta de ca monasterios de su filiacion, y se creian autorizados
ridad, aprobándolos en 1119 el papa Calisto. La como él para bendecir á los abades y abadesas de
carta de caridad distingue dos especies de jurisdicion,
la Orden; pero se desecharon todas estas pretensio
una particular y otra general. El abad que ha funda - nes, decidiendo el consejo de estado en favor del abad
do oiro monasterio en virtud de la jurisdicion parti general en 19 de setiembre de 1681. De resullas de
cular, ejerce sobre él la autoridad de superior prin esta decision se gobernó la Orden de esta manera: la
cipal, con la facultad de visitarlo y hacer en él los re administracion y jurisdicion interior de los monaste
glamentos que juzgue convenientes; pero su juris rios pertenece solo á sus superiores, y la administra
dicion no se est ende á los demas monasterios que cion temporal pertenece al abad, á quien están sujetos
puedan derivarse de aquella fundacion: por esta razon junto con los otros religiosos que se llaman los senio —
les llaman en la Orden los nietos. Por el contrario, res de la casa. En las deliberaciones se arreglan los
el que no ha hecho otra fundacion no tiene jurisdi negocios á pluralidad de votos, no teniendo el abad
cion mas que en su monasterio, gobernándolo en lo voto preponderante ó decisivo en el capítulo. Con
espiritual y temporal. respecto á los novicios, el abad tiene el derecho de
La jurisdicion general es la que tiene el poder su bendecirlos y de recibir la emision de sus votos, como
premo, y esta soberana autoridad no está confiada á que tiene la jurisdicion interior en los monasterios de
ningun superior particular por la carta de caridad, su filiacion. Tambien le corresponde admitirlos á la
orque reside en la junta general de todos los aba profesion, aunque debe consullar á la comunidad, sin
¿ etc. Despues de redactados los estatutos fundó embargo, el obispo diocesano tiene derecho á ecsami
S. Esteban en 11 13 la abadía de la Ferté, diócesis de narlos, á pesar de todos los privilegios de la Orden.
Chalons en Borgoña, y puso en ella por primer abadá Si el abad fuese comendatario, la suerte de los novi
uno de sus religiosos llamado Bertrand. Se la consi cios pertenecerá á los priores claustrales con la co
dera como la primera hija de la del Cister. El año si munidad: escepcion sabiamente establecida, porque
uiente fundó él mismo la abadía de Pontiñi, en la de otro modo le seria indiferente al abad comenda—
¿ de Auxerre, nombrando primer abad á uno lario que los novicios conviniesen ó no á la casa á
de sus religiosos. Esta es la segunda hija. Despues fun donde querian afiliarse. Hay noviciados comunes
dó en 1115 la abadía de Claraval, tercera hija, cons para todas las clases de la Orden, aunque al tiem
tituyendo en ella por primer abad al ilustre S. Ber po de profesar se les destine especialmente á un mo—
nardo, tan conocido por la predicacion de la segunda nasterio. Despues que han entrado los candidatos en
cruzada, y por haber combatido los errores de Abe las casas comunes de noviciado, deben ser probados
lardo. Aquel mismo año fundó S. Esteban la abadía en aquellas á que se les destina; y antes de la toma
de Morimond, poniendo á, Arnaldo por primer abad del hábito deben ser ecsaminados por el vicario ge
de ella; y esta es la cuarta hija del Cister. Por razon neral de la provincia y el maestro de novicios. Cum
de estas cuatro primeras abadías instituidas despues plido el año de prueba, si se les admite la profesion,
de la carta de caridad se denominan los abades de es deben hacerla en manos del vicario general de la
tas casas los cuatro primeros Padres de la Orden del provincia, y en ausencia de este en las del superior
Cister. Como la abadía del Cister es la madre de todas de la casa-noviciado, con la condicion de que las
las que se fundaron despues, su abad es por derecho pensiones de noviciado las pagan los respectivos mo
gefe superior general de la Orden, tanto en Francia nasterios, á no ser que haya compensacion de reli
como en los paises estranjeros. Es efectivo y tiene giosos. Los que profesan al salir de su noviciado
que ser elegido entre los religiosos de la Orden, y so— son enviados á las casas comunes de estudios ó cole
lamente por los profesos de dicha casa. La eleccion es gios establecidos en cada provincia de la Orden, don
colativa; es decir que confiere en pleno derecho al de permanecen hasta que los concluyen, y vuelven
abad electo la administracion espiritual y temporal en seguida á los monasterios en que han tomado el
sin necesitar que recaiga la confirmacion de la Santa hábito. Los religiosos del Cister hacen voto de esta
Sede. Es tambien consejero nato en el parlamento de bilidad en un monasterio particular. Este voto for
Dijon; tiene derecho de asistir á los estados genera ma un vínculo y un contrato recíproco entre el mo
les del reino, y á los particulares de la provincia de nasterio que le recibe y el religioso que promete su
Borgoña. En los concilios tiene asiento inmediato á los estabilidad en él. Por este contrato el monasterio
obispos con los mismos honores y prerogativas, y se adquiere un derecho sobre el religioso, asi como este
le reputa el primero de los abades. le adquiere sobre el monasterio. Los religiosos que
Gobierno de la Orden del Cister. La casa del Cister, profesan en un monasterio son los únicos que compo-.
representada por el abad general, tiene una inspec— nen su comunidad, pues á los demas se les conside
cion sobre todas las de la Orden; y los abades parti ra como esternos: Monachi hospites. Estos son aque
culares de aquellas, que han fundado otras, tienen llos que se les envia á otra casa distinta de la de
respectivamente, como se ha dicho, por la carta de su residencia fija, ya sea para que espien sin escán
caridad, una jurisdicion sobre ellas; pero esta ju dalo las faltas que hayan cometido, ya por otras ra
risdicion queda siempre sometida á la autoridad ge zones, como las de una enfermedad, ó con el fin de
neral del abad superior de la Orden. Los, abades de aliviar á las casas que hayan esperimentado desas—
Caraval, de la Ferté, de Pontiñi y de Morimond han tres, ruinas ó incendios. Pero á escepcion de este ca
disputado esta preeminencia al abad general, alegando so, no se puede trasladar á un religioso sin permiso
que son iguales á este y tienen una autoridad man del abad general; y entonces la casa donde profesó
comunada con él, con la sola distincion de que él es tiene que pagar la pension de los religiosos trasla
 BER g•)3) BER
dados, á no ser que lo hayan sido por causa de ruina, reunion reside el poder legislativo de la Orden, con
incendio, elc. Debemos tambien, observar que los facultad de formar nuevos estatutos ó interpretar los
padres inmediatos no pueden trasladar ningun reli antiguos. El poder ejecutivo de cuanto se ha dispnes—
gioso de su filiacion sino, en tiempo de sus visi to en el capítulo pertenece al abad general. Tiene el
ias regulares, con el objeto de reforma; y aun necesi derecho y la posesion de disponer los reglamentos ne
tan para ello el consentimiento de los seniores de la cesarios para mantener la disciplina regular, mejorar
comunidad. En las casas comunes de noviciado y co el gobierno y hacer que se observen las leyes y ésta
legios, los vicarios generales pueden despedir á los tulos de la Orden. En el capítulo general se juzgan en
religiosos díscolos é intrigantes. último recurso las diferencias que se suscitan entre
Los priores claustrales de las abadías con título de los individuos de la Orden en materias puramente
encomienda, no están bajo la lutela de los abades co peculiares á ellos. Cuando ocurre el caso de haber di
mendatarios; solo pueden instituirlos ó destituirlos losvision en las opiniones, de suerte que no haya mayo
padres inmediatos despues de haber consultado al vi ría de volos, entonces se remite el negocio al definito
cario general de la provincia. Pero el abad general, rio para desempatar el capítulo. El definitorio es tam
visitando por sí ó por comisionados al efecto las casas bien juez en las causas que el capítulo remite á su de
de la Orden, puede destituir á los priores, poniendo cision cuando no quiere ni tiene lugar para despa
otros en su lugar, sin perjuicio de la autoridad del pa charlas. Este formá una especie de tribunal nombra—
dre inmediato, si hubiese otra causa. El vicario ge do por el abad del Cister en el capítulo general. Pro
neral puede tambien destituirlos, si han dado motivo nuncia este sus sentencias con la autoridad del abad
para ello. Los priores claustrales deben ser elegidos eneralde quien reciben su institucion todos los miem
de los profesos de la misma casa, á no ser que no los ros, y las pronuncia en nombre suyo. Esplicare—
haya capaces para desempeñar este destino, lo cual mos cómo se compone dicho tribunal. El abad, como
debe espresar en sus títulos el padre inmediato. Los padre general, nombra cuatro abades de su filiacion,
cillereros, los síndicos, los procuradores y los demas á los cuales instituye definidores, y al mismo tiempo
oficiales nombrados para la administracion de lo tem instituye como tales á los cuatro primeros abades de
poral han de ser instituidos por el abad, de acuerdo la Orden. Cada uno de estos presenta al del Cister cin
con la comunidad, en las abadías regulares; y en las co abades de su filiacion, entre los cuales elige cua
que son por título de encomienda los nombra el prior tro y los instituye definidores, encontrándolos capa
y los religiosos, debiendo ser indispensablemente in ces para desempeñar su oficio; y si en el definitorio
dividuos profesos de la casa, á menos que no se en hubiese empate de votos, corresponde al abad gene
cuentren sugetos capaces para desempeñar estos ofi ral deshacerlo con el suyo, que en ese caso es decisi—
cios; debiendo los nombrados prestar juramento en vo; sobre lo cual observaremos que en las causas que
manos del abad y en presencia de los religiosos del interesan á los abades personalmente, el general es
monasterio. por derecho su juez; esta especie de causas no pue—
La autoridad perteneciente á la administracion y den remitirse al definitorio síno cuando están empa—
gobierno reside en la superioridad local, porque la tados los votos en el capítulo. Es preciso tambien ad—
autoridad del abad general y de los padres inmedia vertir que el capítulo general tiene facultad para de -
tos está limitada á mantenerlos, corregirlos y refor poner á su gefe en el caso que indica la carta de
marlos, pudiendo solo ¿ en tiempo de la vi caridad. En los asuntos de disciplina y susceptibles de
sita regular, porque solo ella suspende la autoridad apelacion van por grados: del vicario general al pa
de los superiores locales. La administracion de los dre inmediato, de este al abad general y del abad
monasterios es comun y de consuno entre el abad general al capítulo general. Los religiosos no pueden
sus religiosos, porque en cualquiera punto que sea apelar en materias puramente peculiares á ellos, fue—
el interés de la comunidad, debe esta prestar su con ra de la Orden, sino en los casos de una injuria ma—
sentimiento á los actos pertenecientes á él. Por consi nifiesta ó injusticia notoria. Pueden tambien usar de
guiente, no pueden hacerse ninguna clase de présta esta via en los casos que los reglamentos los autori—
mos, ni enagenar cosa alguna, permutar, hacer cor zan á ello.
te de maderas, ejecular arriendos enfitéuticos, ni ac Los libros de liturgia, como que sirven para el uso
to alguno importante de administracion, sin que la de la Orden, solo pueden imprimirse por la autoridad
comunidad lo haya deliberado á pluralidad de votos: del capítulo general ó sus diputados; mas pasado el
es preciso tambien haber obtenido el consentimiento tiempo que duran los capítulos, el abad del Cister tie
del vicario general y del padre inmediato, debien ne el derecho y está en posesion de conceder los
do ademas constar el permiso y aprobacion del abad despachos y privilegios pará imprimirlos. Ningun re.
del Cister y el capítulo general. Los procuradores y ligioso de la Orden que sea autor de alguna obra pue
vicarios generales son instituidos ó destituidos por el de publicarla sin el permiso del capítulo ó del abad
capítulo general, y en el intérvalo de su celebracion general. Asi este como los padres inmediatos y los vi
por el abad del Cister, que obra de acuerdo y con carios generales tienen el derecho de formar una co
sentimiento de los cuatro primeros padres de la mulidad en cada casa proporcionada á sus rentas,
Orden. no pudiéndose disminuir sin el permiso del capítulo
El abad general es el que convoca y señala el tiem general ó del abad del Cister. Cuandovaca una abadía
po en que se ha de celebrar el capítulo general, que regular, la administracion espiritual y temporal per
es cada tres años, presidiéndole con título de autori tenece al monasterio vacante, conservando igualmen
dad y como superior. Todos los abades y priores titu te la jurisdicion sobre las otras abadías que estánsu
lados son por derecho miembros del capítulo. En esta jetas á él, entendiéndose solo esta en lo espiritual. El
TOMO I. 38
 B2H. 234 BER
abad, padre innmedialo, preside la eleccion de las aba Privilegios de la Orden del Cister. Esta Orden tiene
dias de su filiacion. El es el que indica el dia para la las causas en devolucion en el gran consejo; de mo—
eleccion: el prior de la casa vacante convoca á los re do que los que tengan negocios con los religiosos de
ligiosos profesos de su monasterio, que son los únicos esta Orden, sea demandando ó defendiéndose, estan
ue tienen voto en ella. Si el padre inmediato no pu obligados á llevarlas á este tribunal. Los jueces del
¿ presidirla en persona no podrá dar la comision departamento de Douai y del de Besanzon son los úni
á otros diputados al efecto, sino en el caso de que el cos que han resistido este privilegio, y por las cartas
vicario general se halle ausente ó sea justamente sos patentes del 30 de marzo de 1726á los del parlamen
pechoso; porque le corresponde presidir en ausencia to de Flandes se les ha mantenido en el privilegio de
del padre inmediato, mas aunque pertenece al padre no poder ser separados de sus jueces naturales, se—
inmediato la presidencia, no hay duda en que el abad gun observa Denisart. Debemos añadir que despues
general puede hacerlo mancomunadamente, y en del edicto del mes de julio de 1775, que fija la com
concurrencia con los demas abades en todas las casas pelencia del gran consejo, los religiosos no pueden
de la Orden. Una vez elegido el abad, su eleccion se usar de su privilegio sino como los arrendatarios ó
confirma por el padre inmediato, y el abad general administradores, y sus herederos ó representantes,
la aprueba en seguida. A este mismo ó á sus delega aunque se les puede citar a ellos mismos en este tri
dos ¿ bendecir los abades y abadesas de la bunal sin que puedan demandar su sentencia. La
Orden, debiendo estos por su parte prometer obe esencion de diezmos es uno de sus privilegios. Es
diencia al abad ¿ra á su padre inmediato al la inmunidad ecsistia solo en el fruto de las tierras
tiempo de la ceremonia de la bendicion. El abad del que poseia en propiedad, y que cultivaba con sus ma
Cister, como gefe y superior de la Orden, puede visi nos ; mas por una bula de Martino V, espedida en
tar por derecho, y está en posesion de hacerlo, á todas 123, se estendió la esencion á las tierras que culti
las casas de la Orden por sí mismo ó por personas co van los arrendatarios de la Orden por sí ó por medio
misionadas por él; y en el tiempo de su visita ejerce de jornaleros; sin embargo, los arrendamientos nun
todos los actos de jurisdicion. Los otros padres aba ea pasan de nueve años. Nuestros reyes, desde Fran
des, que llamamos Padres inmediatos, pueden visilar cisco I hasta Luis XV inclusive, corroboraron estos
las casas de su filiacion; pero deben hacerlo en per privilegios con varios despachos registrados en el
sona, pues no pueden diputará otro ó nombrar co gran consejo. Este tribunal, conservador de los mis
misionado mas que cuando el vicario general de la mos privilegios, decidió en 1.° de marzo de 170, que
provincia está ausente ó es legítimamente sospecho la esencion de los diezmos se podia reclamar sin que
so, Este vicario general visita en persona todos los obstase la posesion contraria de casi tres siglos: la
años las casas de su vicariato, Los vicarios generales sentencia cilada en la coleccion de jurisprudencia se
solo están sometidos al abad de Cister y al capítulo dió en favor de la abadía de Mortemer contra el cu
general, aunque en los grados de apelacion esten su rato de Lihons; pero se dice que hubo despues otra
bordinados ¿ Padres inmediatos. sentencia del mismo tribunal, fecha 28 de marzo de
Los colegios generales de la Orden estan adminis 1743, en la que se resolvió que habia lugará la pres
trados por la autoridad del capítulo general, y en los cripcion contra la esencion si alegaba una posesion
intérvalos por la del abad de Cister. A este abad ó de cuarenta años. Las religiosas de Bellefond, del
al capítulo es á quien pertenece instituiró destituir los curato de Tourni, que estaban mas de cuarenta años
rovisores, los regentes y demas oficiales. Ningun re en posesion no interrumpida de percibir los diezmos
igioso puede graduarse en la universidad sin haber 6l ¿ tierras de la abadía de Beaubec, y los religio—
obtenido el permiso del capítulo ó del abad general; sos, quisieron echar por tierra esta posesion recla
y este se le concede, precediendo el atestado de los mando sus privilegios; pero se juzgó que no esta
rovisores y regentes de los colegios. Cuando un re ban al abrigo de la prescripcion, juicio que nos pa—
igioso quiere irá estudiar á los colegios, necesita el rece muy conforme á los principios en esta materia.
consentimiento de la casa donde ha profesado, y es— Se podria concluir de este juicio que cuando los reli
ta tiene que pagar la pension del religioso en el cole— giosos entran en dominios enagenados no pueden vol
gio á donde vaya. ver á la esencion que gozaban, como se suponia an
Como solia suceder que ocurrian negocios impor tes de la decision de 173; y se aseguraba que habian
tantes que no podian dejarse hasta el capítulo gene— vuelto efectivamente, segun olras dos sentencias da
ra, por ser urgentes, se determinó en el Breve de re— das por el gran consejo, una el 13 de diciembre de
forma que espidió Alejandro VII en 1666, acompa 1707 á favor de los religiosos de Ribour, y otra el
ñado con los despachos reales registrados en el gran 10 de junio de 1712á favor de los religiosos de Vaux
consejo, ¿ en el intérvalo de un capítulo general á de-Cernay. Podemos deducir de todos estos antece—
otro se celebrase una reunion, indicando al abad del dentes que la esencion de los diezmos era únicamente
Cister el dia y el paraje en que se debia celebrar. para los religiosos; de suerte que si se llegan á ena
Los convocados á ella son los cuatro primeros, los genar las tierras que tienen la esencion, el compra
demas abades visitadores de las provincias, los pre dor no goza del beneficio de la inmunidad, y queda
sidentes de las congregaciones y los procuradores ge obligado á pagar el diezmo de ellas al que le cor—
nerales de la Orden. Todos estos tienen voto delibe responda por derecho. Asi se resolvió en 8 de setien
rativo y decisivo para arreglar, provisionalmente bre de 1616 en favor del cura de Fomperon contra los
cuanto puede interesar al gobierno de la Orden, dejan religiosos de la abadia de Chateliers. Esta sentencia,
do salvas las facultades al capítulo general para re que se halla en el código de los curas, decide al mis
formar definitivamente la deliberacion. mo tiempo que los religiosos no pueden convertir la
 BER 255) BIB
esencion del derecho de diezmos que tenian en nin do Martin Vargas, fué el que formó en 1421 esta con—
gun otro derecho útil, ni reservárselo para sí. Cuando gregacion en Monte-Sion, cerca de Toledo, en Es—
se trata de los diezmos enagenados, que están posei paña; pero aunque esta congregacion abrazó el pri—
dos por alguna corporacion eclesiástica, no tiene lugar mer espíritu de la Orden del Císter, sus religiosos no
la esencion en favor de la Orden, y está obligado á tienen nada comun con los otros. ("Estracto del Dic—
pagarlos. Asi lo observa el autor de la coleccion de cionario de Jurisprudencia) (1).
jurisprudencia por haberlo dispuesto el gran consejo Beso de paz. W. PAz.
en 3 de marzo de 171, declarándolo asi terminante—
mente en favor del cabildo de S. Quiriaco de Provins, Bessarion, monge griego del Orden de San
contra la abadía de Vauluisant, condenando al mis Basilio, patriarca titular de Constantinopla, arzo
mo tiempo al arrendatario de la abadía á pagar al bispo de Nicea, despues cardenal y legado en Fran
cura de Chenestron los diezmos de lanas y menudos cia, cerca de Luis XI, murió el año 1472. Este sa—
bio hombre se hizo odioso á los griegos cismáticos
que la abadía disputaba no se le podian exigir.
Antiguamente todos los legos particulares que es— por el celo con que trabajó para reunirlos con la
Iglesia romana. Compuso muchas obras con este fin
taban empleados en los monasterios de la Orden, ta
y una defensa de la filosofía de Platon, que todas
les como los criados, los arrendalarios, los enfiteutas
se hallan en el tomo diez y seis de la Biblioteca de los
o terratenientes de la abadía, estaban bajo la juris Padres.
dicion espiritual de los superiores de ella. Los reli gio Bruker, aunque protestante, ha hecho un elo
giosos les administraban los sacramentos del bautis— complelo de este célebre cardenal. Hist. filos.,
mo y matrimonio. tomo , p. 43.
Esta especie de privilegio fue confirmado por una Bethleemºtas , (Los hermanos). Orden
bula de 1257, la cual se habia autorizado depues religiosa, fundada en las islas Canarias por un gentil
con los despachos reales de 1711 y 1719; pero ha hombre francés, llamado Pedro de Betencouri, para
biendo reclamado el clero de Francia que no habian asistir á los enfermos de los hospitales. El pontífice
sido registrados en la forma debida, anunciándolos Inocencio XI aprobó este instituto en 1687, y le man
como obrepticios y subreplicios, el consejo de Estado do seguir la regla de S. Agustin. El hábito de es—
mandó el 19 de mayo de 1747 que se citasen ó pre tos hospitalarios es semejante al de los capuchinos,
sentasen aquellos despachos, y hasta que la mate— á escepcion del cinturon, que es de cuero, y de que
ria estuviese mas particularmente examinada, tu - llevan zapatos, y una medalla al cuello que repre
viese efecto la bula de 1257 solo con las personas senla el nacimiento de Jesucristo en Belem.
que habitaban en el recinto de los monasterios de la Biblia del griego ByBLos papel, se ha formado
Orden , mas sin poder administrar, ni aun á estos, ByBlyoN libro, y se ha llamado biblia á la Sagrada
los sacramentos del bautismo y matrimonio. Hay pue Escritura, para designar los libros por escelencia, y
blos, sin embargo, en donde los religiosos del Cister los que son mas dignos de respeto. Esta coleccion de
están en posesion de ejercer las funciones de curas, y libros sagrados, ó escritos por inspiracion del Espíri
estos pueblos son como unas parroquias con titulo tu Santo se divide en dos partes, á saber: el antiguo
de beneficio. El señor de Roquete creyó que podia y el nuevo Testamento. Los primeros son los que se
poseer un beneficio de estos; mandó que le nombra— escribieron antes de la venida de Jesucristo; contie—
sen en un curato dependiente de la abadía de Bussie nen, ademas de la ley de Moises, la historia de la
res á causa de que no habia titular en él: la Orden del creacion del Inundo, de los patriarcas y de los ju
Cister reclamó contra este paso, y por una decision dios, las predicciones de los profetas, y varios trata
del gran consejo en 14 de setiembre de 1722, se dos de moral. El nuevo Testamento contiene los libros
mandó que el curato continuase servido por un re que se han escrito despues de la muerte de Jesucristo
ligioso de la abadía aunque no fuese titular. Deni por sus apóstoles ó por sus discípulos.
sart observa que hay otras dos sentencias de la mis En la palabra TEsTAMENTo, enumeraremos los li
ma especie del 9 de marzo de 171 y del 19 del mis bros del antiguo y nuevo Testamento, segun el ca
mo mes de 1736, una en favor de la abadía de Char— tálogo que ha hecho de ellos el Concilio de Trento,
lieu contra el cura de Bequelay, y otra en favor de sesion ..."
los religiosos de Mortemer contra el cura de Lihons. En el artículo EscRITURA SAGRADA hablaremos de la
En el artículo BENEDIcriNo hemos visto que aquellos inspiracion de los libros sagrados, de su autoridad en
religiosos no podian poseer beneficios de la Orden del materias de fé, de las reglas que se deben seguir pa
Cister, aunque la regla de San Benito es la base de ra adquirir conocimiento del uso que de ellos deben
¿ tampoco poseer los de la Orden de Clunió ¿?
los dos institutos. Por la misma razon los Bernardos teólogos, etc.
IO
En el artículo LIDRos SANTos los compararemos con
de la congregacion de San Mauro, sin que se verifi los escritos que los chinos, los indios, los güebros y
que la traslacion del religioso de la una á la otra. los mahometanos llaman libros sagrados, y demos—
Asi se decidió en 7 de febrero de 1535 en favor de traremos el ridículo método que los incrédulos han
un clunista contra un religioso del Cister por razon seguido para atacar los nuestros. Aqui no considera
del priorato de Longopont. remos á la Biblia sino como un objeto de historia li
BERNARDOS. Son otros religiosos diferentes de los teraria y de crítica.
de la Orden del Cister, de los cuales he hablado. Su La mayor parte de los libros del antiguo Testamento
congregacion es conocida con el nombre de un San --; - -

Bernardo que no es el mismo que ilustró la abadía de º S. El autor francés (que no es Bergier) comete varias
inexactitudes de mucha consideracion en este articulo Véase le
Claraval; un monge de la Orden del Císter, llama que sobre él decimos en el art. oRnBNEs aELIGIosAs.
 BIB 256 BIB
han sido recibidos como sagrados y canónicos por los apreciadas son las que se copiaron por los judios de
judios, asi como por los primeros cristianos. Hay, sin España; los judios de Alemania han hechó un gran
embargo, algunos que los judios no han reconocido número de copias, pero son menos exactas. Tambien
como tales, y que los cristianos de los primeros siglos es fácil distinguirlas á primera vista. Las primeras se
parece que tampoco los recibieron como canónicos, hallan en hermosos caracteres cuadrados, como las
pero que despues han sido colocados en el canon por biblias hebreas de Bemberg, de Esteban y de Plan
ia lglesia. Tales son los libros de Tobias, de Judith, tin; las de Alemania tienen caracteres semejantes á
la Sabiduria, el Eclesiástico, y los dos libros de los los de Munster y de Gryphe.
Macabeos. Tambien algunos antiguos han dudado de Ricardo Simón observa que las biblias hebreas ma
la autenticidad de los libros de Baruch y de Esther. nuscritas mas antiguas tienen á lo mas 600 ó 700
Seria singular que la Iglesia cristiana no tuviese, con años de antigüedad; sin embargo, el rabino Me
respecto á los libros sagrados, la misma autoridad nahem, del que se han impreso en Venecia algunas
que se concede á la sinagoga. Respecto de los que no obras en 1618 sobre las biblias hebreas, cita un gran
quieren referirse mas que al testimonio de esta última, número de ellas, que en este tiempo databan ya uas
véase CANoN. de 600 años.
Todos los libros que antiguamente han sido reco Morino no dá, mas que 500 años de antigüedad al
nocidos como sagrados se escribieron en hebreo, no célebre manuscrito de Hillel , que se halla en Ham—
tenemos los otros sino en lengua griega; pero no es burgo; El P. Hopbigant no ha conocido alguna que
cosa esencial para la inspiracion de un autor que pase de 6 á 7 siglos, ha creido que la de la biblio
escribiese en una lengua mas bien que en otra; una teca de los Padres del Oratorio de la calle San-Hono
traduccion fiel supie al original cuando este falta. rato en París podria tener cerca de 700 años. Menos
Los antiguos caracteres hebreos de que se sirvie antiguas le han parecido al abate de Sallier las de la
ron los escritores judios eran los samarilanos, perobiblioteca del rey. Los dominicos de Bolonia en Italia,
despues de la cautividad de Babilonia hallaron los tienen uno del Pentateuco del que ha hablado el Pa
caracteres caldeos mas cómodos, y los adoplaron. La dre Mont-Faucon, y cuya antigüedad puede ser de
fecha de este cambio no es ciertamente conocida, pe cerca de 900 años.
ro no ha podido introducirse mas alteracion en el En Inglaterra en la biblioteca bodleyana hay uno
testo que la sustitucion que nosotros hemos hecho de del Pentateuco y otro que contiene el resto del an
nuestros caracteres modernos á las letras góticas. tiguo Testamento, á los que se dá 700 años de anti
Los libros escritos en hebreo se han traducido mu güedad. El mas famoso manuscrito del Pentateuco
chas veces al griego. La version mas antigua y mas samaritano, que conservan los samaritanos de Na
célebre es la de los Setenta, que se hizo antes d Je— plusa, que es la antigua Sichem, se dice que no tie
sucristo, y de la que se cree se sirvieron los apóstoles; ne mas que 500 años. Quizá sea mas antiguo el de
hablaremos de ella en su lugar. la bibloteca ambrosiana. de Milan. Existe un ma
Aunque la mayor parte de los libros del nuevo Tes nuscrito hebreo en la biblioteca del Vaticano, que se
tamentó tambien se recibieron como canónicos desde dice fué copiado en 973.
los primeros tiempos de la Iglesia, hay sin embargo Las biblias hebreas mas antiguas impresas, se han
algunos de los cuales se ha dudado desde entonces: publicado por los judios de llalia, particularmente
tales son la carta de S. Pablo á los hebreos, la de las de Pesaro y Brescia. Los de Portugal empezaron
S. Judas, la segunda de S. Pedro, la segunda y ter á imprimir en Lisboa algunas partes de la Biblia,
cera de S. Juan, y el Apocalipsis. antes que se les espulsase de este reino. Se puede ob
Todos se escribieron en griego, escepto el Evan servar en general que las mejores biblias en hebreo
gelio de S. Mateo que originariamente se cree com son las que se han impreso á vista de los judios;
puesto en hebreo, pero cuyo testo ya no existe: este son tan cuidadosos en notar hasta los puntos y las
es el parecer de S. Gerónimo. Algunos críticos mo— as, que nadie puede llevar mas allá la esac
dernos han querido sostener que todo el nuevo Testa titud.
mento se escribió inmediatamente en siriaco, pero A principios del siglo XVI, Daniel Bomberg, im
su opinion está absolutamente destituida de prueba primió muchas biblias hebreas en folio en l.” en Ve
y de verosimilitud. El P. Hardouino que quiso pro necia, de las que algunas son igualmente apreciadas
har que los apóstoles escribieron en latin, y que el por los judios y por los cristianos. La primera apa
griego no es mas que una version, no ha persuadido reció en 1517, lleva el nombre de su editor Felix
á adie. Praeenni, es la menos esacta. La segunda se publi
Se deja comprender que los egemplaresde la Biblia có en 1526. Se añade en ella los puntos de los Mas
han debido multiplicarse mucho; no solamente los sorelas, los comentarios de varios rabinos, y un pre
testos originales se han copiado hasta el infinito, sino facio de R. Jacob ben Chajim.
que de ellos se han hecho versiones en la mayor parte En 1548 imprimió el mismo Bomberg la Biblia en
de las lenguas vivas y muertas. Bajo esla doble con folio de este último rabíno, que es la mejor y mas
sideracion se conocen las biblias hebreas, griegas, la perfecta de todas. Se distingué de la primera biblia
tinas, caldeas, siriacas, árabes, colas, armenias, del mismo editor, en que tiene el comentario de R.
rsas, moscovitas, etc., y las que se hallan en David Kimchi, sobre las crónicas ó Paralipómenos,
engua vulgar. Daremos una pequeña notícia de unas que no se halla en la otra.
y de otras. Esta edicion fue sobre la que Buxlorf(padre) im
BlBLIAS HEBREAS. Estas son manuscritas ó im brimió en Basilea en 1648 su biblia hecrea de los ra
presas. Entre las manuscritas las mejores y las mas inos; pero se le escaparon muchasfallas, sobre todo
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en el comentario de estos. Buxtorf alteró un nú de leer, y los sumarios en latin, lo que las hace de
mero bastante considerable de sus pasages poco fa un uso muy cómodo para las ediciones latinas y las
vorables á los cristianos. En el mismo año apareció concordancias.
en Venecia una nueva edicion de la biblia rabínica de La biblia pequeña en 16.º de Roberto Esteban,
Leon de Módena, rabino de esta ciudad; pretendió es apreciada por la belleza de caracteres. Es necesa
haber corregido un gran número de defectos espar rio observar que se ha hecho de ella otra edicion en
cidos en la primera edicion; pero ademas de que es— Ginebra que se le parece mucho, pero que su impre
ta biblia es muy inferior en el papel y en los ca sion es mala, y el testo menos correcto.
racteres á las demas biblias de Venecia, pasó por Se pueden añadir á este catálogo algunas otras
manos de los inquisidores que no dejaron enteros los biblias hebreas sin puntos, en 8." y en 2.º, muy esti
comentarios de los rabinos. Por lo demas no vemos madas de los judios, únicamente porque la peque
en qué los dardos lanzados por los rabinos contra ñez del volumen las hace mas cómodas para sus si
el cristianismo, y cercenados por Buxtorf y por los nagogas y sus escuelas. Hay dos ediciones de esta
inquisidores, podian contribuir á la perfeccion de una forma, la una de Plantin en 8.ºá dos columnas, y la
biblia hebrea -
otra en 2." impresa en Leiden, por Rafelingio en
La de Roberto Esteban es apreciada por la be 1610, Ilay tambien otra edicion de Amsterdan en
lleza de los caracteres, aunque es infiel. Plantin las grandes cáracteres, por Lorenzo en 1631, y otra en
imprimió tambien en Amberes muy hermosas; la me 12.” de Francfort en 1694, con un prefacio de Leus
jor es la de 1566 en l...º Manassé ben Israel, sábio den, pero está llena de defectos.
judio portugués, dió á luz en Amsterdan dos edicio El testo hebreo sin puntos, que el P. Houbigan
nes de la Biblia en hebreo, una en l." y otra en 8.º La del Oratorio ha hecho imprimir en París año de 1753
primera está en dos columnas, y por lo mismo mas en cuatro volúmenes en fólio con un comentario es
cómoda para el lector. muy bella; pero se le echa en cara al autor haber
En 163% Rabbi-Joseph Lombroso publicó una aventurado con demasiada ligereza algunas correc—
nueva edicion en ...º en Venecia con ligeras notas ciones, y haberse espuesto muchas veces á corromper
al pié de las páginas, en las que se esplican las pa el testo, en lugar de enmendarlo.
labras hebreas, por las correspondientes españolas. En adelante se estará menos espuesto á este peli
Es muy apreciada esta biblia de los judios de Cons gro, con el ausilio de la biblia hebrea que el doctor Ken
lantinopla; el testo se distingue en ella por una es— nicot acaba de imprimir en Londres en dos volúmenes
trellita, y los lugares en que es necesario leer el punto en fólio. la seguido la edicion de Vander-Hoogt, que
camets por una o y no por una a. pasa por la mas correcta, y ha reunido al pié de las
De todas las ediciones de las biblius hebreas en páginas todas las variantes recogidas segun los me
8.", las mas hermosas y correctas son las dos de o es manuscritos que hay en toda Europa. Nada
José Athias, judio de Amsterdan; la primera de 1661 falta para tener el testo hebreo con la correccion mas
es preferible por el papel; la segunda de 1667 es perfecta. V. TEsto.
mas fiel. Sin embargo, Vander-Hoogt ha publica— BIBLIAS GRIEGAS. El estraordinario número
do una en 1705, que todavía sobrepuja á estas dos. de biblias que se han publicado en griego puede re—
Despues de Athias, tres protestantes que entendian ducirse á cuatro clases principales: á saber, la Com—
el hebreo. á saber: Claudio, Jablonski y Opicio se plutense, ó de Alcalá de Henares, la de Venecia, la
empeñaron en dar á luz una biblia hebrea. La edi de Roma y la de Oxford. -

cion de Claudio se publicó en Francfort en 1677 en La primera apareció en 1515 por orden del car—
4." Se hallan al pié de las páginas las diferentes va denal Gimenez, y se colocó en la biblia poliglota, que
riantes de las primeras ediciones; pero el autor no es generalmente se llama Complutense. Esta edicion no
siempre esacto en el modo de acentuar, sobre todo es esacta, porque en muchos lugares se ha variado
en los libros poéticos de la Escritura; por otro lado la version de los Setenta, por acomodarla al testo he
como esta edicion no se hizo á su vista, abundan los breo. Sin embargo, , se ha reimpreso en la poliglota
defectos por todas partes. La de Jablonski apareció de Amberes, en la de París y en la biblia en º co
en Berlin en 1699 en 4." La impresion es muy lim— nocida con el nombre de Vatablo, sin enmendar na
pia, y hermosos los caracteres. Aunque el autor pre da en ella. -

tende haberse valido de la edicion de Athias y de la La segunda biblia griega es la de Venecia, que apa.
de Claudio, parece que no ha hecho mas que seguir reció en 1518, en la que el testo griego de los Se—
servilmente la edicion en ..º de Bomberg. La de Opi tenla se ha impreso conforme al manuscrito sobre
cio se imprimió tambien en ..º en Keil en 1709. Es que se trabajó. Esta edicion está llena de faltas de los
lástima que la hermosura del papel no haya corres copistas, pero fáciles de corregir. Se ha reimpre
pondido á la de los caracteres. Por lo demas el autor so en Strasburgo, Basilea, Francfort y otras partes,
no ha hecho uso mas que de los manuscritos de alterándola en algunos lugares por acomodarla al tes
Alemania, y se ha olvidado de los que hay en Fran to hebreo. La mas comoda de éstas biblias es la de
cia; defecto, de que tambien adolecen Claudio y Ja— Francfort, á la que se han unido cortos escolios, sin
blonski. Sin embrago eslas biblias tienen la ventaja, nombrar el autor, pero que se atribuyen áJunio; sir
que ademas de las divisiones ya generales, ya parti ven para señalar las diferentes interpretaciones de los
culares, en paraches y en pemkim, segun el méto antiguos traductores griegos.
do de los judios, se hallan divididas tambien en ca La tercera es la de Roma en 1587, llamada la edi
pítulos, y en versículos segun el de los cristianos; cion Sistina en la que se han introducido algunos es
contienen tambien los Heri H(étib, ó diversos modos colios sacados de los manuscritos griegos de las biblio.
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tecas de Roma, y recogidos por Pedro Morino: corre Plantin dió su edicion, y todas las demas se hicie
como la mas esacta. Esta hermosa edicion se reim ron segun la de este: d modo que las biblias co
primió en París en 1628 por el P. Morino del Ora— munes son segun la correccion de Clemente VIII.
torio, que unióá ella la antigua version latina de V. VULGATA.
Nobilio; esta se imprimió en la edicion de Roma, Hay un gran número de biblias latinas de la terce
separadamente con los comentarios. La edicion grie ra clase, ó versiones latinas de los libros sagrados,
ga de Roma se halla en la políglota de Londres, , y hechas sobre los originales hace dos siglos. La pri
lleva al margen las diferentes lecciones sacadas del mera es la de Santos Pagnino, dominico; se imprimió
manuscrito de Alexandria. Ha salido tambien en In— en Lyon en º en 1528, es muy estimada de los ju
glaterra en 4.º y en 12.º con algunas variaciones. díos. La perfeccionó el autor, y se hizo en Lyon una
Lamberto Bos la ha publicado tambien en Franéker hermosa edicion en folio en 152 con escolios, bajo el
en 1709 con todas las diferentes lecciones que ha po— nombre de Michael Villanovanus. Se cree que este fue
dido reunir. Miguel Servet, quemado despues en Ginebra. Servet
Ultimamente la cuarta biblia griega es la que se tomó este nombre porque nació en Villanueva de
ha hecho en Inglaterra por un ejemplar muy anti Aragon. Tambien en Zuric salió una edicion en l.º
guo, conocido con el nombre de manuscrito de Ale— de la biblia de Pagnino. La reimprimió en folio Ro
jandría, porque vino de esta ciudad. Se empezó en berto Esteban con la vulgata en 1586, en cuatro co
Oxford en 1707 por el doctor Grabe. En esta biblia, el lumna con el nombre de Vatablo, y se ha inser
manuscrito de Alejandrino se ha impreso como es tado en la biblia en cuatro lenguas de la edicion de
taba, sino tal como se ha creido que debia estar. Se Hamburgo.
han variado en él los lugares que parecian tener Esta misma version de Pagnino ha sido retocada
defectos de los copistas y las palabras que eran de hecha literal por Arias Montano con la aprobacion
diferentes dialectos. Algunos aplaudieron esta liber e los doctores de Lovaina, inserta despues por or
tad. otros la han vituperado; decian que el manus den de Felipe II en la políglota Complutense: y por
crito era esacto, que las interpretaciones ó diversas último en la de Londres, en la que se halla colocada
lecciones se desechaban en las notas de que iba acom entre líneas del testo hebreo. Se han hecho de ella
pañado V. SETENTA y para las demas versiones grie— diferentes ediciones en folio en ..." y en 8.º, á las
gas. V. VERSIoN. que se ha añadido el testo hebreo del antiguo Testa
BlBLl AS LATINAS. Aunque su número sea to mento, y el griego del nuevo. La mejor es la de 1471
davia mayor que el de las biblias griegas se pue— en folio.
den reducir á tres clases, á saber: la antigua vul— Despues de la reforma, han dado tambien los pro
gala moderna llamada versio itala, traducida del testantes muchas versiones latinas de la biblia. Las
griego de los Setenla: la vulgata moderna, cuya ma mas apreciadas son las de Munster, de Leon Juda,
yor parte se tradujo del testo hebreo, y las nuevas de Castalion y de Tremelio: las tres últimas se han
versiones latinas hechas sobre el hebreo en el si— reimpreso muchas veces. La de Castalion sobresale
glo XVI. De la antigua vulgata que se sirvieron en por la elegancia del latin; pero críticos sensatos juz
occidente hasta despues del tiempo de San Gregorio gan que esta afectacion de elegancia esta fuera de lu
Magno no han quedado mas libros enteros que los gar en los libros santos. La version de Leon, Juda,
Salinos, el libro de la Sabiduria, el Eclesiastés, y ministro de Zuric, corregida por los teólogos de Sa
fragmentos diseminados en los escritos de los Padres, lamanca, ha sido unida á la antigua edicion publicada
de donde Nobilio ha intentado sacarla toda entera: por Roberto Esteban con las notas de Watablo. Las de
¿ que se ha ejecutado en nuestros dias por Junio y Tremelio son preferidas por los calvinistas,
on Sabatier, benedictino. y se han hecho un gran número de ediciones. Pero
Se conoce un gran número de ediciones de la vul es muy poco á propósito que los protestantes den á
gata moderna, que es la version que hizo San Geró— estas diferentes ediciones la preferencia sobre la vul
nimo del testo hebreo. El cardenal Gimenez hizo in— gala, sus mas hábiles críticos como Luis de Dios,
Sertar en Su ¿ una que está alterada y enmen Drusio, Milles, Walson, Capel han hecho justicia á la
dada en muchos lugares. La mejor edicion de la vul fidelidad de esta.
gala de Roberto Esteban es la de 150 reinmpresa Se podian añadir, como cuarta clase biblias la
en 155, en la que se encuentran en el margen las tinas la de Isidro Clario ó Claro, escritor católico
diferentes lecciones de los manuscritos de que se pudo y obispo de Fuliño en la Umbria. Poco contento este
tener conocimiento. Los doctores de Lovaina la revi autor con las correcciones hechas á la vulgata, quiso
saron, y añadieron lecciones nuevas desconocidas á corregirla de nuevo sobre los originales. Su obra, im
Roberto Esteban : su mejor edicion es la que tiene al presa en Venecia en 1542, se colocó primero en el
fin las notas críticas de Francisco Lucas de Bruges. indice, despues se permitió y remprimió en Vene—
Todas estas correcciones de la biblia latina se hi cia en 156, á escepcion del prefacio y de los prole
cieron antes del tiempo de Sisto V. y de Clemen gómenos, en los que parecia que Clario no respetaba
te VIIl, despues de los cuales nadie se ha alrevido á mucho la vulgata. Muchos protestantes han seguido
hacer cambio alguno en el testo de la vulgata, á no este mismo método; Andrés y Lucas Osiando, cada
ser en comentarios ó en nolas separadas. Las cor uno publicó una edicion de la vulgala corregida so
recciones mandadas por Clemente VIII en 1592 son bre los originales. ¿Pero han estado siempre bastan—
las que ha seguido toda la Iglesia católica; de las te seguros del sentido de los originales, para juz
dos reformas que hizo este pontífice, siempre se han gar con certeza que el intérprete latino se habia en
atenido á la primera. Despues de esta fue cuando gañado?
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BIBLIAS ORIENTALES. . Se puede poner á la nal. Contribuye mucho á ello el genio de la lengua:
cabeza de estas biblias la version samaritana, que no como era la lengua materna de los que escribieron el
contiene mas libros de la Escritura que el Pentatéu nuevo Testamento y un dialecto del hebreo, hay mu
co. Se ha hecho esta version en samaritano moderno, chas cosas que están mas felizmente espresadas en
que se diferencia poco del caldeo, sobre el testo he esta version que en ninguna otra. No es menos esac
breo escrito en caracteres samaritanos, que difiere en ta en cuanto al antiguo que en cuanto al nuevo Testa
algunas cosas del testo hebreo de los judios. El mento; no hay ninguna de la que se puedan sacar
P. Morino del Oratorio es el primero que hizo im mas recursos para la inteligencia de los libros sagra
rimir el Pentatéuco hebreo de los samarilanos con dos. Gabriel Sionila publicó en Paris en 1525 una
a version: ambos se encuentran en las políglotas de hermosísima edicion de los salmos en siriaco con una
Lóndres y de Paris. Los samaritanos tienen todavia traduccion latina.
una versión árabe del Pentatéuco, que no se ha impre La primera edicion del nuevo Testamento siriaco es
so y que es muy rara; hay dos ejemplares en la biblio la que dió á luz Widmanstadio en Viena de Austria,
teca del rey. El autor de esta version se llama el año 1555 á espensas del emperador Fernando. En
Abusaid, el que puso al margen algunas notas li el manuscrito traido de Oriente, de que se sirvió,
terales. Tienen tambien la historia de Josué que no faltaba la segunda carta de S. Pedro, la segunda y
consideran como canónica, y es diferente del libro la tercera de S. Juan, la de S. Judas y el Apocalipsis.
de Josué de nuestras biblias. De aqui se dedujo con bastante ligereza que estos li—
BIBLIAS CALDEAS. Estas no son puras versiones bros no estaban admitidos en el canon de las Escritu—
del testo hebreo, sino glosas ó paráfrasis de este mis ras por los jacobitas, aunque los tuviesen entre sus
mo testo, que hicieron los judios en lengua caldea manos. Pero Luis de Dios, ayudado de Daniel Hein
cuando la hablaban. Llamábanlas TARGUMIN, inter sio, hizo imprimir en siriaco el Apocalipsis en 1627
pretaciones. Las mas apreciadas son las de Onkélos, sobre un manuscrito que José Scalígero habia legado
que no contienen mas que el Pentaléuco, y la de Jo— á la universidad de Leiden. En 1630 el sabio Pocock,
nathan sobre los libros que los judios llaman proféti de edad solamenle de 24 años, encontró en la biblio—
cos, como Josué, los Jueces, los libros de los Reyes y teca bodleyana un hermosísimo manuscrito siriaco,
los Profelas mayores y menores. La mayor parte de que contenía muchos escritos del nuevo Testamento, y
las demas paráfrasis caldeas están llenas de fábulas. en particular las cuatro cartas que faltaban en el ma
Se las ha colocado en la grande biblia hebrea de Ve nuscrito de Viena. Añadio á los caracteres siriacos
necia y de Basilea; pero se leen con mas facilidad en los puntos segun las reglas dadas por Gabriel Sionita,
las poliglotas, donde está al lado la traduccion latina. el testo griego, una version latina comparada con la
V. TARGUM. de Etzelio, sábias y útiles nolas, é hizo imprimir esta
BlBLIAS SlRIACAS. Los sirios tienen dos ver— obra en Leiden; asi se llegó á darnos una version com
siones del antiguo Testamento en la lengua de sus an letísima de la Sagrada Escritura en una lengua que
tepasados: la una hecha sobre el griego de los Seten ¿ sido la de nuestro Salvador y la de los apóstoles.
la, que no se ha impreso, y la otra sobre el testo Esta se halla en la poliglola de Inglaterra, t. 5.
hebreo, que se hallá en la poliglota de Paris y de Como no se puede probar que esta version de la
lnglaterra. Entre las versiones orientales de la Escri Escritura Sanla ha sido hecha en diferentes tiempos
tura esta es una de las mas preciosas. Parece que se por diversos autores, resulta de esto que cuando se
hizo en tiempo de los apóstoles, ó inmediatamente izo, las iglesias de Siria consideraban como canóni—
despues, para las iglesias de Siria, en las que toda cos los libros que los protestantes han tenido á bien
via está en uso. desechar, y cuya canónicidad todavia están obstina.
Los maronitas y demás cristianos que siguen el rito dos en desconocer.
sirio dan á esta version una antigüedad fabulosa. Assémani, Biblioteca orient., t. 2. c. 13, atribuye
Pretenden que una parte ha sido hecha por mandato esta version á Tomás de Heraclea obispo de Germa—
de Salomon, por Hiram , rey de Tiro, y lo demás por nia, que escribia en 616.
orden de Abgaro, rey de Edeso, comiemporáneo de No es muy apropósito que Beausobre haya inferido
Nuestro Señor. La única prueba que dan de esto es que el Apocalipsis no se hallaba en el manuscrito
que S. Pablo en su carta á los de Efeso, c. , y.8, dado á luz por Widmanstadio, y que de esto ha—
citó un pasage del Ps. 68, y., 18, segun la version si ya deducido que las iglesias orientales no reconocian
riaca. Dice que Jesucristo ha llevado cautiva una este libro como canónico. De las demas pruebas ne
multitud de siervos y ha dado dones á los hombres; gativas que alega sobre este mismo hecho, no se si
el hebreo y los Setenta dicen solamente: ha recibido gue nada. V. APocALIPsis.
dones para los hombres. Es demasiado ligera esta prue BlBLIAS ARABES. Las hay en gran número, unas
ba para establecer un hecho tan importante. para uso de los judios, otras para el de los cristianos
Lo cierto es que esta version es muy ¿? , que en el pais en que unos y otros hablan esta lengua. Las
ha precedido á todas las demás, escepto á la de los Se primeras se han hecho todas del hebreo. Las segundas
tenia, los targums de Onkélos y de Jonathan. Este de otras versiones. De modo que la version árabe de
es el parecer de Pocock en su prefacio de Miquéas; los sirios ha sido tomada del siriaco, despues que esta
del abad Renaudot, en su coleccion de liturgias orien última lengua no se entendia ya por el pueblo; la de
tales; de Walton, Prolég. 13, etc. Parece que su au los coftos tuvo por original la version cola de que
tor es un cristiano, judio de nacion, que sabia muy hablaremos despues.
bien las dos lenguas, es muy esacta y traslada con En 1516 Agustin Justiniani, obispo de Nebio, dió
mas precision que ninguna otra el sentido del origi en Génova una version árabe del salterio con el testo
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hebreo y la paráfrasis caldea, á la que añadió la in laquias y el nuevo Testa tiento. Estos varios trozos se
lerpretacion latina. En las poliglotas de Lóndres y de han impreso primero por separado, y despues se han
Paris se halla una version árabe de toda la Sagrada reunidó en la poliglota de Inglaterra. Esta version pu
Escritura; pero ha observado el abad Renaudot que do haberse hecho ó del griego de los Setenta ó del
esta version no es mas que una compilacion de otras cofto, que tambien ha sido tomado de los Setenta. El
muchas que nada lienen de comun con aquellas de nuevo Testamento etíope inpreso primero en Roma
que se sirven los cristianos orientales, ya sirios ya en 158 es muy inesacto; sin embargo, con todas sus
colos, y asi que entre ellos no tendria ninguna au faltas no ha dejado de pasar a la poliglota de Londres.
loridad. Liturg, orient. collect., t. 1, p. 208. Walton, Proleg. 15, cree que esta version del nuevo
Hay una edicion completa del antiguo Teslamento Testamento se ha hecho sobre el lesto griego, y no
en árabe, que se imprimió en Roma en 1671 de orden sobre ninguna otra version; está persuadido con ra—
de la congregacion de propaganda fide, pero se la ha zon que los etiopes tienen una version completa de la
querido adaptar á la vulgata, y por consecuencia no Biblia en su lengua que se parece mucho al caldeo, y
está siempre conforme en el testo hebreo. por consiguiente al hebreo, pero él no pudo llegará
Muchos sabios piensan que la que se halla en las iener un ejemplar completo. Su nuevo Testamento
poliglolas ha sido hecha por Saadias Gaon, rabino contiene el Apocalipsis y las cuatro epístolas, cuya
ue vivia á principio del siglo X: en efecto, Aben antenticidad han querido disputar ciertos críticos mo
zrra, gran antagonista de Saadias, cita algunos pa dernos. En otra parte hablaremos de su creencia y
sajes de su version que se hallan en la de los poliglo de su liturgia. V. ETIoPEs. -

tas, pero otros piensan que la version de Saadias no BllbLl AS ARMENIAS. Hay una version armenia
existe ya. muy antigua de toda la Biblia, que ha sido hecha se—
En 1622 Espenio hizo imprimir un Pentateuco gun el griego de los Setenta por algunos doctores de
árabe que se llamó el Pentateuco de Mauritania, por esta nacion desde el tiempo de S. Juan Crisóstomo,
que era ¿ uso de los judios de Berberia; la version hácia el año 10, y mucho antes que los armenios es
es muy literal, y corre como esacta. Ya en 1616 ha tuviesen metidos en el cisma. Como los ejemplares
bia publicado en Leiden un nuevo Testamento com manuscritos eran raros y muy apreciados, Oscham ó
pleto en árabe, tal como lo habia hallado en un ma Uscham, obispo de Uschouanch, uno de sus doctores,
nuscrito. Antes de él en 1591, se habian impreso en hizo imprimir entera la biblia armenia, en ...", en
Roma los cuatro Evangelios en árabe con una version Amsterdan en 1664, y el nuevo Testamento en 8.º
latina en folio. Esta version se ha reimpreso en las El saltero armenio se habia ya impreso mucho tiem
poliglolas de Paris y de Lóndres con algunas varia po antes. Parece que los armenios no han desechado
ciones hechas por Gabriel Sionita. ninguno de los libros que nosotros llamamos deutero
BI BLIAS COFTAS. Estas son las biblias de los canónicos.
cristianos de Egipto que se llaman coftos, ó coptos; BI BLl AS PERSAS Como el cristianismo ha estado
están escritas en el lenguaje antiguo de aquel pais, floreciente en la Persia desde el siglo I de la Iglesia,
que es una mezcla del griego y del egipcio. No hay se cree que se tradujo luego la Escritura Santa en
parte alguna de la biblia impresa en cofto, pero hay lengua persa, y algunos de los Padres parecen indi
muchas mantiscritas en las grandes bibliotecas, sobre carlo; pero no queda nada de esta antigua version,
todo en la del rey. Como la lengua cofta no la en que se supone haber sido hecha del griego de los Se—
tienden ya los cristianos de Egipto, desde que se ha tenta. El Pentatéuco persa que se ha impreso en la
llan bajo la dominacion de los mahometanos, leen la poliglota de Inglaterra, es obra de R. Jacob, judio
Escritura en una version árabe. En cuanto á las lec-, persa. Los cuatro evangelios que se han puesto en la
ciones sacadas de la Escritura que leen en su litur misma lengua con una traduccion latina se han tra
gia, las toman de una version cofta que se ha hecho ducido mas recientemente; muchos críticos han crei
sobre la de los Setenta. do que esta version era muy inesacta; y no valia la
El abad Renaudot piensa que su version cofta del pena de publicarse.
nuevo Testamento es muy antigua; tiene como cierto BIBLA GOTICA. Se cree generalmente "¿ Ul
que los antiguos solitarios de la Tebaida no enten ó Gulphilas, obispo de los godos que habita
ian mas que el cofto, y que no podian leer el Evan an en la Mesia, hizo en el siglo IV una version de la
gelio mas que en esta lengua. Seria bueno tener mas Biblia entera para sus compatriotas, escepto los libros
conocimiento que el que tenemos de esla version, y de los Reyes; temió que la lectura de esta historia
saber si contiene todos los libros que nosotros recibi fuera peligrosa para una nacion demasiado belicosa;
mos como canónicos; este seria un argumento mas que las guerras y combates de que allí se hace men
contra las pretensiones de los protestantes. Podemos cion no fuesen para ella pretesto de tener siempre las
presumirlo asi, porque los ahisinios, o los egipcios armas en la mano. Sea de esto lo que quiera, de esta
que recibieron su creencia y sus usos delos patriarcas antigua version no hay mas que los cuatro evangelios
de Alejandria, tienen en su biblia el mismo número que se imprimieron en Dordrecht en 1665, segun un
de libros que nosotros; al menos esto es lo que refiere manuscrito muy antiguo.
el P. Lobo. V. á Lebrum. Espl. de los cerem , t., pá BIBLIA MOSCOVITA. Es una traducion de la Bi
gina 535. blia entera en lengua esclavona, de la que es un dia—
BlBLIAS ETIOPES. Los cristianos de Etiopia que lecto la lengua de los rusos ó moscovitas. Ha sido
se llaman abisinios han traducido en su lengua algu hecha sobre el griego é impresa en Ostravia ú Os
nas partes de la biblia, como los Salmos, los Cánticos, Ostrog, en Volhinia, provincia de Polonia, á espensas
algunos capítulos del Génesis, Ruth, Jóel, Jonás, Ma de Constantino Basilio, duque de Ostravia, para el
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nso de los cristianos que hablan la lengua esclavona. adopcion la verdad al desnudo sin esplicacion, ni mi
No se sabe precisamente en qué tiempo, ni por qué ramiento. Sin duda que la Sagrada Escritura es la
autor se ha hecho esta version, pero no puede ser fuente primitiva, de la que proviene nuestra fé, y el
muy antigua. fundamento sobre que está establecida; pero su in
BIBLIAS EN LENGUAS VULGARES. El número terpretacion está fuera del alcance de un vulgo igno—
de ellas es prodigioso, y son demasiado conocidas es— rante, y no seria racional por nuestra parte el es
tas traducciones para que sea necesario tratar de perar que el espíritu prevenido ó mal dispuesto de
ellas en particular. En la palabra VersioN diremos un pagano fuese capaz de establecer su fé, sin mas
algo de las que se han hecho por los protestantes. ausilio sobre semejante fundamento. De aqui se pue
En cuanto á las diferentes biblias de que acabamos de ya deducir que las sociedades bíblicas, o reunio
de hablar, véase á Kortholt, de variis biblior edit; R. nes que se proponen efectuar la conversion de los in
Elias levita; El P. Morino Earercitationes biblicae; Si - fieles por la simple distribucion de las biblias, no
mon Hist. crit. del antiguo y nuevo Testamento; Du son mas que un medio de industria que emplea la co
pin Bibliot. des aut. eccles. t. 1; Biblioteca sagrada del dicia para hacer fortuna.
P. Lelong, y la que dom Calmet añade á su Diccio En lugar de esponer la imperfeccion de los resul
nario de la biblia. tados obtenidos por los misioneros protestantes, se
Nos quedan dos palabras que decir de la division gun el testimonio de los misioneros católicos, que son
de la Biblia en libros, capítulos y versículos. En el los que mejor se hallan en posesion de conocer la inu
principio el testo estaba escrito de seguido sin ningu tilidad de sus esfuerzos, dejaremos que hablen nues
na division; el año 396 un autor, cuyo nombre no se tros mismos hermanos separados; su declaracion no
sabe, dividió en capítulos las cartas de S. Pablo, y será sospechosa de parcialidad.
puso en ellas epígrafes que indican el asunto en com «Las sociedades bíblicas y las asociaciones de los
pendio, como se hace ahora. El año 58 Euthalio, misioneros protestantes, decia en 1833 el Monthly
diácono de Alejandría, hizo lo mismo con las Actas Revieu, hace mas de treinta años que han empezado
de los apóstoles y con las epístolas canónicas; divi sus trabajos. Han reunido y gastado las rentas del
dió tambien estas diferentes obras en versículos. Otros Príncipe, y tienen agentes en todas las partes del glo
introdujeron las mismas divisiones en el testo de los bo. Las islas mas apartadas de los mares del Sud, del
¿ antes y despues de Euthalio, mas de es— Oceano pacífico y de los mares de la India han sido
to no se sabe nada de cierto. Véase Zacagni, Collet. visitadas por sus enviados. Los hemos oido procla
veter. Monum. Ecclesia graecae et latina, en ...” Ro mar mas de una vez no solamente que la idolatria
mae 1698. estaba destruida en las islas pequeñas sino que aun la
En cuanto á la division de los libros del antiguo Tartaria, la Persia y la india estaban á punto de ce
Testamento en capítulos y en versículos, es mucho der á los esfuerzos de los misioneros británicos, y
mas moderna; no se ha hecho hasta el siglo XHII, adoptar la religion de la cruz. . . . . . . . . .
cuando se formaron las concordancias de la Biblia. La sociedad bíblica de Londres ecsiste hace ya
V. CoNCoRDANCIA. mas de 30 años; tiene solamente en Inglaterra 629
Por consiguiente esta division no hace ley; si para sociedades ausiliares que trabajan bajo su direccion.
hallar el verdadero sentido de un pasage es necesa Se ha establecido un gran número de sociedades
rio reunir dos versículos separados, ó dividir por una protestantes semejantes en París, Lion, Tolosa, Mom
nueva puntuacion una frase reunida en un solo ver peller, Nimes, Sl rasburgo, Nantes, Montauban y
sículo, esto es muy permitido, á no ser que se haya otros puntos de la Francia, en los Paises Bajos, laSui
fijado por la tradicion el sentido diferente. La Igle za, la Prusia, la Dinamarca, etc. La sociedad bíblica de
sía, declarando auténtica la Vulgata, no ha decidido Lóndres, solo de suscriciones, recibe anualmente ra
que la puntuacion y la colocacion de los versículos sean ras veces menos de 80 mil libras esterlinas (7.510,588
una cosa sagrada á la que no está permitido tocar. reales vellon.) Ha habido años en los que han subido
á mas de 90,000 (8. 49, 11 rs. v.n.) Ha impreso doce
IBíblicas (sociedades). Abrir de repen millones de biblias en 13 lenguas. Ademas de las
te á los gentiles el tesoro de nuestras Santas Escritu sociedades establecidas para la distribucion de las
ras, sin haberlos dispuesto para ello con una conve biblias, hay un gran número de asociaciones de mi
niente preparacion, es lo mismo que tratar de curar sioneros, que recogen tambien suscriciones. Solo
al que tiene los ojos llagados, obligándole á mirar en Inglaterra hay diez de diferentes sectas, en los
los rayos del sol en toda su fuerza y esplendor, con Estados—Unidos cinco, tambien de diversas sectas;
ran peligro de dejarle enteramente ciego, ó al menos las hay igualmente en Alemania, en Francia, etc.;
eslumbrarle con la abundancia de la luz; es lo inis-, todas poseen grandes rentas. En 1819 solo una de
mo que dar fuertes alimentos á los niños de pecho, estas asociaciones recogió por su parte 30 mil libras
cuando su debil estómago apenas puede digerir la esterlinas (2.816,70 rs. vn.) y los ingresos anuales
mas ligera leche. Principiar la obra del proselitismo de las otras nueve, un año con otro, son de 25 mil
por enseñar á los paganos, de cualquiera nacion que libras esterlinas (2.37,059 rs. vn.), cada una en
sean, desnudo el testo de nuestros libros sagrados, Inglaterra solamente. Segun las noticias publicadas
seria empezar nuestros trabajos por donde debería - por estas asociaciones, el número de misioneros ocu—
pados por ellas en los dos mundos es de 2,800, sin
mos acabarlos, y querer levantar un edilicio antes de
poner los cimientos. No se ilustra á un pueblo cho contar sus mugeres, cuyos eficaces trabajos en la mis
cando de frente con todas sus preocupaciones; no se ma carrera son ensalzados. Sin embargo, la mayor
consigue que abandone sus errores, presentando á su parte de estos misioneros son personas de una edu—
T()M10 I, 39
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cacion muy limitada. En general, el origen de su
vocacion es el deseo de recibir crecidas asignaciones
¿ sistema se proteje, y tales comparacíones
se aplauden por muchos de los que en otras ocasio—
de 200á300 libras esterlinas (18,776 á28,165 rs. v.n.) nes pueden tenerse con justos títulos por personas
cada año, con solo la obligacion de leer y hacer cir piadosas é ilustradas!!!»
cular la Biblia entre los pueblos idólatras. ¿Y á este De modo, que las sociedades bíblicas han sido de
precio es un sacrificio, para hombres que apenas claradas por los mismos protestantes no solamente
pueden procurarse en sus casas medios de vivir, el inútiles, sino aun perjudiciales
embarcarse para paises lejanos, sobre todo, cuando Los soberanos pontíficesPio VII, Leon XII, Pio VIII
pueden llevar con ellos sus mugeres y sus hijos? y Gregorio XVI han manifestado el peligro de ellas
Cuando han llegado á su destino, qué sacrificios ha á la Iglesia católica, y las han reprobado severa
cen 6 pueden ¿, El primer pensamiento que mente.
les ocupa es el alojarse con toda la comodidad que o S" El sabio jesuita Perrone en su obra: Prae
pueden, y estar siempre que es posible bajo la pro lectiones theologicae, part. II, cap. 1 V de Locis theolo
teccion del fuero británico. No penetran sino raras gicis, despues de muy interesantes noticias y curiosas
veces en las naciones bárbaras; tienen miedo á la pesinvestigaciones, presenta en dos notas la siguiente
te y al cólera morbo, á los que no hemos de esperar notable relacion, que dá una idea de la espantosa
racionalmente que quisiesen esponer sus familias, ó actividad y sorprendente rapidez con que el proles
que estas les permitiesen esponerse ellos mismos; y tanlismo ha marchado en la terrible via de su espí
por otra parte, por las mismas razones tampoco tie ritu privado. «Dice que en 1838 la sola sociedad
nen deseos de ser mártires. bíblica anglicana recogió la suma de 846,316 li
Tenemos pruebas abundantes de que en tanto bras esterlinas (79. 5,137 rs. v.n.) en esta forma:
tiempo como los misioneros británicos continuaron su los metodistas dieron 83,68 (7.853,071 rs. vn.); la
sistema actual, debian necesariamente fracasar en mision de la iglesia anglicana 83,7 (7.83,200
sus tentativas de convertir á los indios; la educacion, reales vn.): las misiones de conocimientos cristianos
las costumbres y las preocupaciones de estos pueblos 84,052 (7.891,000 rs. v.n.); los misioneros de Lón
son tales, que la simple lectura de la Biblia, sin es dres 70,255 (6595,705 rs. v.n.); el resto lo dieron
las demas sectas. Lo adquirido por la sociedad bibli—
tensas instrucciones preliminares para ayudarles á su ca
interpretacion, mas bien los aleja de la religion del ascendió en 1838 ¿ libras esterlinas
Evangelio que los atrae á ella. Por otra parte, las (150.211,765 rs. vn.), de las cuales dió la Inglaterra
traducciones de la Biblia en los dialectos de la India la cuarta parte, con otro tanto contribuyeron los Esta.
son tan inesactas y tan eminentemente ridículas, que dos-Unidos de América, y con lo demas las colonias
aun el escaso número de indios que la leen con espí inglesas diseminadas en odo el mundo, y los paises
ritu imparcial y ageno de preocupaciones se fasti protestantes de Europa. En 1839 contaba la sociedad
dian de ella á primera vista. Se puede, pues, asegu con 5000 misioneros, 50 imprentas, 300 ayudantes
rar que á pesar de las pomposas relaciones que leemos misioneros y maestros, y centenares de ministros in
de la sociedad bíblica y de las de los misioneros bri dígenas. En Africa se contaban 128 misioneros pro
tánicos, sus resultados realmente valen tan poco, que piamente dichos; en las Indias 168; en la isla de
el écsito es nada en comparacion de los enormes Ceylan 28; en el archipiélago índico 81; en las In
gastos que ocasionan. dias occidentales 118.
En un folleto titulado, Razones por las que no soy Establecióse la sociedad en 180, y de aquí á 1840.
miembro de la sociedad bíblica, M. Arturo-Felipe Per es decir , , en el espacio de 36 años, distribuyó
cebal, capellan ordinario del rey de Inglaterrº, ha— 12.000,000 de ejemplares de la Biblia, traducidos á
cia en la misma época la revista de las traducciones 18 idiomas. Solamente en Francia se distribuyeron
de la Biblia ejecutadas en Europa y en Asia, y 137,000 ejemplares en 1839. Quejábase Caballero,
declaraba que contienen errores tan groseros y here— inglés encargado por la sociedad para distribuir las
gias tan monstruosas, que son capaces de alarmar biblias, que solo España, Italia y Austria eran los
todas las conciencias aunque sean poco timoralas. paises, por los que no podia correr el opus divinum;
Esclamaba en su indignación contra les innobles au mas ya tuvo la España la felicidad de contarse en el
tores de estas traducciones, que habian ya costado á número de las naciones libres. En verdad que no se
la sociedad bíblica un millon y seiscientas mil libras descuidaron los melodistas en esparcir el veneno por
esterlinas (150.211,765 rs. vn.) - España: pues desde el mes de setiembre al de enero
«Sepan pues ya los pobres engañados de Inglater de 1841 distribuyeron 100,000 ejemplares de la Bi
ra, con qué fin se emplean sus sueldos por semana. blia, traducida al español. Mas la oficina tipográfica
Seguramente que es para helarse la sangre en las de Barcelona, continúa Perrone, se estableció para
venas de un cristianó el pensar en la presuncion imprimir dicha biblia. De Austria nada sé con cer
sacrílega de una sociedad, que asi se atreve á bur teza; pero respecto de Italia tengo á la vista varios
larse de la revelacion del Todo-Poderoso, y que tie ejemplares impresos en el idioma de este pais, y á.
ne la osadia de presentará las naciones paganas, y la verdad corrompidos, y de la infiel versien de Dio—
de ofrecer á la credulidad de los que la sostienen, dato, hombre inficionado de la heregía calvinista,
estos ejercicios de niños de escuela, como la palabra ejemplares que fueron distribuidos en dicho pais por
sagrada de Dios. Sin embargo, semejantes traduc los viajeros protestantes».
ciones son las que mas de una vez en las reuniones A esta curiosa noticia pudieran añadirse detalles
de esta sociedad se las ha comparado, por una blas no menos instructivos para conocer á fondo la astu
femia verdadera, al don milagroso de lenguas; y cia de los enemigos de la luz y de la verdad: baste
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decir que por España no solo ha corrido la version volúmenes en folio de Guillermo Cabe, sabio inglés, y
¿ sino tambien en los varios dialectos que otra muy compendiada de Grandcolas en dos volúme
nes en 12."
se hablan en las diferentes provincias de este pais,
tales como el catalan, valenciano, vascuence y hasta Es preciosa la Biblioteca de Focio compuesta en el
en el tosco, á la par que burlesco y vagamundo, lla— siglo IX, porque se pone en ella un estracto de un gran
mado caló, de que usan los gitanos. Sin embargo, for número de obras de autores antiguos, tanto eclesiás
zoso es convenir en una cosa que honra mucho al es— ticos como profanos, que se han perdido.
píritu santo y, tradicional de España, y es, que á pe—
sar de la honda division que han causado en este pais
los disturbios políticos, á pesar tambien de tantos es—
Biblistas. Nombre dado por algunos autores
á los hereges que no admiten mas que el texto de la
cándalos, desafueros y maquiavélicas lentativas, ha Biblia ó de la Sagrada Escritura sin ninguna in—
debido retirarse muy frio de la Península el espíritu terpretacion, y desechan la autoridad de la tradicion
de propaganda protestante. y de la Iglesia para decidir las controversias de la
religion. Muchos protestantes sensatos han puesto en
Rablieo, palabra que emplean los teólogos para ridículo esta preocupacion, y la han llamado biblio
designar un género de método y de estilo conforme mania, porque con mucha facilidad degenera en fa—
al de la Sagrada Escritura. Al nacimiento de la teo— natismo. Es un absurdo el querer que todo fiel que
logía escolástica en el siglo XII, los doctores cristia sepa leer se halle en estado suficiente para entender
nos se dividieron en dos clases: los que continuaban el texto de la Sagrada Escritura, y para conformar á
probando los dogmas de la épor la Sagrada Escritu él su creencia. Este es un medio escelente para for—
ra y la tradicion se llamaron doctores bíblici, positivi, mar tantas religiones como cabezas. V. EscRITURA
peretes; á los otros se les llamó doctores sententiarii, SANTA.
et novi, porque se atenian principalmente á esplicar
las sentencias de Pedro Lombardo, y á probar sus Biena, Mal. En el orden físico son palabras re
opinionespor razonamientos filosóficos. Estos se creían lativas, y que es necesario abstenerse de tomarlas en
muy superiores á los primeros, y se llevaban toda la un sentido absoluto.
consideracion; pero fueron atacados fuertemente por En la historia de la creacion se dice: «Wió Dios to
sus contrarios. Guiberto, abad de Nogent, Pedro, abad do lo que habia hecho, y le pareció bien ó muy bueno.»
de Moutier-la-Celle, Pedro el Chantre, doctor de Paris, Gén., c. 1, y. 31. ¿Es decir que las criaturas no tie
Gauthier y Ricardo de S. Victor, escribieron concalor nen defecto? Serian iguales á Dios; el bien absoluto es
contra los escolásticos, y los acusaron de alterar la fé lo infinito, Llamamos bien lo que es útil y conforme á
cristiana; hizo grande eco esta disputa, sobre todo en nuestros deseos; pero nuestros deseos no son siempre
las universidades de Paris y de Óxford, y continuó justos y sabios: lo que es un bien para nosotros, mu
durante el siglo XIII. Gregorio IX, para contener es chas veces es un mal para los demas.
le desórden, escribió á los doctores de Paris: «Os or Las criaturas son buenas cuando corresponden al
denamos y mandamos rigorosamente que enseñeis la fin para que Dioslas ha criado: esta es una bondad rela
teología pura sin ninguna mezcla de ciencia munda tiva; nopueden ser buenas ó estar bien en otro sentido:
na, que II0 altereis la palabra de Dios con las vanas no se sigue de aqui que no pueda resultar un mal re
imaginaciones de los filósofos, que no paseis de los lativo en inuchas circunstancias, y que Dios no haya
límites establecidos por los Padres, que lleneis los podido hacerlas mejores. Siendo esencialmente limi
espíritus de vuestros oyentes con el conocimiento de lada toda criatura es imposible que no sea buena y
las verdades celestiales, tomándolas de la fuente del mala, y participe del bien y del mal bajo diferentes
Salvador». Du Boulay, Hist. Acad. Paris, tom. 3, aspectos. -

página 120. Todo es bueno con relacion al fin para que Dios lo ha
En el renacimiento de las letras volvieron los teó—
criado; pero todo podia ser mejor, porque el poder del
logos al método de los Padres, pero sin abandonar Criadores infinito; todo es malo á los ojos de los in
enteramente el de los escolásticos, que pone mas or crédulos, porque nada está conforme con sus deseos;
den y claridad en las discusiones de las materias. empero estos mismos deseos son un mal, puesto que
V. Escolástico.- no estan en armonia con la voluntad de Dios ni con
la razon. -

Biblioteca. Se ha llamado asi no solo el lugar En la hipótesis de los ateos, del materialismo y
donde estan reunidos los libros, sino las recopilacio de la fatalidad, nada hay realmente bueno ni malo,
nes ó catálogos de autores y obras de cierta clase. Ilay puesto que ninguna cosa puede mejorarse ni empeo
dos ó tres de estas cuyo conocimiento debe tener un rarse; no existe el orden ni el desórden, puesto que
teólogo: tal es la Biblioteca sagrada del P. Lelong del no existe una inteligencia suprema que todo lo arregle.
Oratorio, en la que este sabio dá noticia de todos los No son otra cosa que sofismas todas las objeciones
autores que han trabajado sobre la Sagrada Escritura de los maniqueos, repetidas por Bayle y por los ateos
en general, ó sobre alguna de sus partes, El P. Des sobre el orígen del mal: confunden el bien y el mal
molets la publicó en 1723 en dos volúmenes en folio, relativos con el bien y el mal absolutos. Si Bayle hubie
En segundo lugar la biblioteca de los autores eclesiás ra leido con mas atencion á S., Agustin, hubiese visto
ticos; el Dr. Dupin ha hecho una estensísima en 58 vo que este Padre conoció bien el punto de la dificultad,
lúmenes en 8.º, y Dom Remigio Cellier, benedictino, y fundo sus respuestas en un principio evidente: «por
una mas exacta en 2 volúmenes en º, con el título grandes que sean los beneficios que Dios haga, dice,
de Historia de los autores eclesiásticos. Hay una en dos aun puede hacerlos mayores, puesto que es Todopo
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deroso; no hay, pues, ningun grado de bien que no sea llamamos bondad y malicia de las acciones humanas.
un mal en comparacion de otro grado superior; ¿con Si no hubiese una ley suprema emanada de la volun—
qué habremos de contentarnos?» Epist. 18, c. 7, tad de Dios, soberaño legislador, no habria en nues—
número 22. L. contra epist. fundam. c. 25,30,37, etc. tras acciones bien ni mal moral. Cuando una accion
Hé aquí lo que Bayle y sus secuaces nunca han queri cualquiera fuese buena y útil para nosotros, estaría
do comprender. -
mos dispensados de saber si era dañosa á los demas?
Dicen que un ser absolutamente poderoso y bueno El bien moral está en armonía con la ley eterna que
no ha podido hacer mal. Si por esto entienden un mal conocemos por la razon y por la conciencia; el mal no
absoluto, tienen razon. Pero en dónde existe en el ral es contrario á esta ley ó á la ley divina positiva.
mundo el mal absoluto? En ninguna parte, asi como La Escritura dice que cuando Dios crió á nuestros
tampoco hay bien absoluto. Si entienden por mal un adres les concedió la inteligencia, y les enseñó el
bien menor que otro, su principio es falso. Un ser so— ien y el mal. Eccl., c. 17, y.5. No pudo darles este
beranamente poderoso y bueno ha podido sin menos conocimiento sin imponerles una ley; sin ley no hay
cabar su bondad hacer un bien menor que otro bien: deber ni obligacion moral, no hay obras buenas ni
si se empeñan en sostener que Dios dehió hacer el pecado; no hay vicio ni cirtud. Véanse estos artículos.
mayor bien que hubiese podido, caen en un absurdo: Observan los teólogos que entre las acciones li
Dios no seria Todopoderoso si no pudiese hacer cosas bres del hombre hay unas que son buenas ó malas,
mejores que las que ha hecho. Todos los sofismas de únicamente porque estan mandadas ó prohibidas; y
los antiguos y modernos sobre el orígen del mal estan otras que son buenas ó malas por sí mismas, haya
apoyados en este equívoco, y en la falsa comparacion ó no haya ley que las mande ó las prohiba; de
de la bondad unida á un poder infinito, y la bondad consiguiente distinguen la bondad y la malicia fun
de las criaturas unida á un poder muy limitado. damental de ciertas acciones, de la bondad y malicia
Tambien han abusado de las palabras felicidad y formal. Asi dicen: la accion de comer la sangre de los
desgracia. La felicidad es un bienestar contínuo; la
animales en las primeras edades del mundo no era
que en este mundo se puede gozar es necesariamente un crímen en sí misma, sino solo porque Dios la habia
limilada, no solo en cuanto á su duracion, sino en sí prohibido; la observancia del sábado no era un acto
misma, y de consiguiente mezclada de mal y de pri de virtud, sino porque Dios la habia mandado por
vaciones; por perfecta que pueda imaginarse, la cer un precepto positivo. Al contrario, amar, á Dios y
teza en que estamos de que ha de acabar algun dia, al prógimo son acciones esencialmente buenas y
hasta para llenarla de amargura; no hay mas felici laudables, independientemente de toda ley , y Dios
dad absoluta que la felicidad eterna. no ha podido menos de mandarlas á. los hombres;
Las ideas de felicidad y desgracia son tambien no la blasfemia, el asesinato, el perjurio son acciones
ciones puramente relativas, y no ideas absolutas: cual esencial é intrínsecamente malas, y Dios ha tenido
quier estado habitual se tiene por feliz cuando se le que prohibirlas. Las acciones fundamentalmente bue
compara con otro menos afortunado y agradable; y nas ó malas son el objeto de la ley natural; las otras
es desgraciado en comparacion de otro, en el que se son el objeto de las leyes positivas, leyes que Dios era
disfrutarian mas placeres y se padecerian menos pri libre de establecer, 6 dejar de hacerlo.
vaciones. Entre la felicidad absoluta, que es la eter La hondad intrínseca de una acciones, pues, su
nidad, y la desgracia absolula, que es la condenacion, conformidad con lo que exige la soberana, perfec
hay una escala inmensa de estados que no son la fe— cion de Dios, ó con el dictámen de la sabiduría di
licidad ó la desgracia sino comparativamente: en vina: la hondad, estrínseca es su conformidad con
cualquiera de estos estados que se encuentre el hom la ley. La malicia intrínseca, de una accion es su
bre, no es ni absolutamente feliz, ni absolutamente oposicion con esta misma sabiduría divina que dic
desgraciado. Por mas que repitan los detractores de tóá Dios lo que dehia mandar ó prohibir; la malicia
la Providencia que el hombre es desgraciado en este estrínseca es su oposicion á la ley.
mundo, esto solo significa que es menos dichoso de lo Esta sutil distincion puede ser buena para me
que podria y querria ser; pero de aqui nada se sigue todizar nuestras ideas, mas los incrédulos han abu
contra la bondad de Dios, puesto que esta bondad sado mucho de ella: Bayle deduce de esto que aun
nunca puede estenderse hasta hacer al hombre ac en el sistema del ateismo é independientemente del
tualmente tan feliz como puede y quiere serlo. conocimiento de Dios, puede haber bien y mal moral;
Aun cuando un hombre estuviese siempre libre de los materialistas han seguido la misma teoría para
adecimientos y en un goce contínuo de placer, no fundar en su sistema una pretendida moralidad de
aslaria esto para hacerle absolutamente feliz, si no nuestras acciones. Dicen que la bondad moral de una
tuviese la certeza de que estos goces nunca concluirian accion es su conformidad con lo que exige la natura
ni se minorarian. Ahora bien, un sentimiento de pla leza humana, con sus necesidades, con su interés
cer demasiado vivo y continuado largo tiempo dege bien entendido, ó con el interés general de todos, y
nera en dolor y se hace insoportable. de consiguiente, segun el dictámen de la razon y de
Asi, pues, las objeciones deducidas de la pretendida la conciencia: que la maldad moral es la oposicion
desgracia de los séres sensibles y de sus padecimien de una accion á estos mismos objetos. Que haya un
tos, no prueban mas contra la providencia y la hon Dios, dicen, 6 que no le haya, ciertas acciones son
dad divina que las que se quieren deducir de la im por sí mismas conformes ú opuestas al bien general
perfeccion ó de los defectos de las criaturas. Véase de la humanidad: esto nos basta para juzgarlas mo
MAL. MANIQUEisMo. ralmente buenas ó malas. Pero no es esto un juego de
BIEN Y MAL MORAL es lo que con otros nombres palabras? 1." Si la naturaleza del hombre no es di
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ferente de la de los animales, cómo puede ser una la ley del sábado era una leccion de humanidad que
regla de costumbres, una ley propiamente dicha sus obligaba al hombre á conceder reposo á los esclavos,
necesidades , su interés, su superioridad? Entre las aun á los animales. Deut. c. 5.y. 14.
acciones de los animales hay unas conformes á sus Se llamará bien moral lo que es conforme á la ra
necesidades, á su conservacion, á su bienestar, y zan? La razon nos enseña lo que es mal y bien, pero
de consiguiente á su interés y naturaleza; hay otras no es ella la que lo constituye tal; por otra parte
opuestas, como herirse, matarse, devorarse. Sin quién nos obliga á seguir mejor nuestra razon que
embargo, á ninguno le ha ocurrido deducir de ellas nuestro apetito? Lo que es conforme á nuestra con
una regla de costumbres, una ley natural, una obli ciencia? Ocurre el mismo argumento: si la conciencia
gacion moral, ni atribuirles actos de virtud ó críme no nos manifiesta una ley, estamos obligados á sofo
nes, La teoría de los materialistas puede muy bien carla. Lo que en todos sentidos nos sea mas ventajo—
establecer una bondad y una malicia animal; pero so? Nuestra conveniencia no es una ley: y renuncian
apoyar en esta base el bien y el mal moral es una bur. do á ella podremos muy bien ser insensatos, pero no
la y un absurdo. - seremos criminales.
2.º Una acion pnede ser conforme á mis nece— La revelacion, pues, nos ha dado la verdadera
sidades, á mi interés, á mi bienestar, sin que por nocion del bien y del mal moral, ó de la moralidad
eso esté obligado á practicarla, aunque á nadie per de nuestras acciones haciéndonos ver en Dios un
judique; hay circunstancias en que es muy laudable soberano legislador, que ha ejercido esta sublime
la moderacion de nuestras necesidades, la resistencia funcion desde la creacion.
al apetito, la represion de una propension violenta Los filósofos han disputado en vano sobre la regla
y el sufrimiento de una privacionó un dolor; esto es de las costumbres; por separarse de esta idea lumi
un acto de cirtud, puesto que es un efecto de la for nosa y primitiva, solo han encontrado errores y ti
taleza del alma. El derecho de practicar una accion nieblas. V. CoNciENcia. DEBER, LEv NATURAL.
no es siempre un deber: puede estar permitida sin Hay una gran cuestion, es saber si un Dios bueno,
estar mandada; luego no es cierto que la hondad justo y santo ha podido permitir el mal moral, si no
moral ó la idea de virtud en una accion consista en a debido prevenirlo y evitarlo; la trataremos en el
su conformidad con nuestras necesidades, con nues artículo MAL.
tros intereses, nuestro bienestar y nuestra sensibili
dad física. -

Bienes V. RIQUEz.As.
3." Los materialistas afectan confundir en este BIENES ECLESIASTICOS. V. BENEFICIo.
punto el interés particular de nn hombre con el
interés general de la humanidad; unas esto es una Isle naventurados. En teología denota esta
superchería; con frecuencia se hallan encontrados palabra aquellos á quienes una vida pura y santa
estos dos intereses. Cómo probarán que estoy obligado abre el reino de los cielos. Quién podrá pintar el
á procurar el bien general, con preferencia á mi bien encanto de un alma, que, libre de repente de los
personal, á sacrificar mi vida por conservar la de mis lazos del cuerpo, y desembarazada del velo que la
conciudadanos, y á privarme de un placer sensual ocultaba la divinidad , se encuentra admitida á
por temor de ofender alguno? Mis necesidades, mi contemplar esta divina esencia, á verá Dios tal como
interés, mi bienestar se limitan á mí; y en virtud de es, y beber la felicidad en su misma fuente?, «Sere
qué ley debo posponerlos á los de los demas? Si no mos semejantes á él, dice S. Juan, porque le vere
existe un señor ni un legislador que me la mande, mos tal como es». S Juan, c. 3. y. 2. «Vuestros san
soy para mí mismo mi único y mi último fin; en tanto tos, señor, se embriagarán con la abundancia de
estoy ligado con los demás en cuanto pueden con - vuestros bienes, los bañareis en un torrente de deli
tribuirá mi felicidad. Se me habla de un interés bien cias, y los iluminareis con vuestra propia luz».
entendido; pero á mí solo loca entenderlo bien ó mal; Ps. 35, y. 9. Allí desaparecerá la contradiccion
y aunque lo entendiese mal seria á lo mas un error, aparente de los misterios, cuya profundidad asombra
pero nunca un delito. á nuestra razon; allí se desenvolverá toda la esten
4." De que la sabiduria de Dios ecsija que se sion del amor de Dios hácia nosotros, y la multitud
mande ó prohiba tal accion, no se sigue que esté de sus beneficios; alli se encenderá en el alma ese
amor inmenso, que jamás se estinguirá, puesto que
obligado á ello por una ley anterior é independiente el
de su voluntad; si Dios no hubiese querido crear amor de Dios hácia ella será su alimento eterno.
nada, dónde estaria la ley que á ello le hubiera obli BIENAVENTURADOS se llaman tambien aquellos
gado? Esto solo significa que Dios se hubiera puesto á quienes la Iglesia ha decretado un culto público,
en contradiccion consigo mismo, si al crear al hom— pero subordinado al que se dá á los santos canoniza
breno le hubiera impuesto tal ley; ahora bien, un Ser dos. La beatificacion es un grado para alcanzar la
infinitamente sabio, no puedecontradecirse ásí mismo. canonizacion. Véanse estos artículos.
Los deistas han abusado tambien de la distincion
que hacen los teologos al defender que Dios no puede EBiennaventuranza. Estado de felicidad de los
llandar ó prohibir por leyes positivas cosas que son santos en el cielo. Véase FELICIDAD ETERNA. No es
indiferentes en sí mismas; esto es un error, pues que absolutamente necesario saber lo que los teólogos es
Dios, por medio de las leyes positivas, asegura mas colásticos entienden por bienaventuranza objetiva y
la observancia de la ley natural, previniendo su beatitud formal.
transgresion. Asi la prohibicion de comer sangre tenia BIENAVENTURANZAS EVANGELICAS. Llamán
por objeto inspirar al hombre horror á la muerte y se así las ocho mácsimas que Jesucristo colocó al prin
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cipio del discurso que contiene el compendio de sumo bre el imperio romano cuando el cistianismo domi
ral. El monte en que se cree le predicó, ha con nó en él, la ¿ reducida á la nada por las cos
servado el nombre de Monte de las bienaventuranzas tumbres del paganismo, por leyes absurdas y por un
puesto que estas mácsimas empiezan con la palabra gobierno despótico se hubiera restablecido cieramen
beati. «Bienaventurados, dice, los pobres de espíritu le por la santidad misma de la moral del Evangelio.
porque de ellos es el reino de los cielos». Se concibe En igualdad de circunstancias en ningunas naciones ,
que Jesucristo por la pobreza de espíritu entiende el progresa mas la poblacion que en las cristianas.
desprecio de las riquezas. «Bienaventurados los man Por otra parte una esperiencia constante enseña
sos, porque ellos poseerán la tierra. Bienaventurados que cuando los viudos de uno ó de otro secso que tie
los que lloran, porque ellos serán consolados. Biena nen hijos se vuelven á casar, es muy á disgusto de
venturados los que han hambre y sedde justicia, porque estos; con una estrema repugnancia se ven obligados
ellos serán harios. Bienaventurados los misericordio á sujetarse á la autoridad de un padrastro ó de una
sos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaven madrastra; y no sin gran sentimiento ven nacer los
turados los limpies de corazon, porque ellos verán á hijos del segundo matrimonio: sin duda alguna que
Dios, Bienaventurados los pacíficos, porque ellos serán en los primeros siglos habia los misinos inconvenien
llamados hijos de Dios. Bienaventurados los que pa les: no es pues de estrañar que los Padres recomen
decen persecucion por la justicia, porque de ellos es dasen tanto la continencia en la viudez.
el reino de los cielos». Mat., e. 5, y 3. y sig. Pero se les acusa de haberse valido de espresiones
Estas mácsimas acreditadas por la esperiencia de demasiado fuertes. Atenágoras dice que las segun
los santos de todos los siglos no necesitan apologia; das nupcias son un adulterio honesto; el autor de la
pero si se quiere ver un comentario elocuente sobre obra imperfecta sobre S. Mateo, falsamente atribuida
ellas, léase el exordio del sermon de Massillon sobre áSan Juan Crisóstomo, asegura que son en sí mis
la felicidad de los santos. V. CoNsEJos Ev ANGELicos. El
mas una verdadera fornicacion; pero que como Dios
Cardenal Belarmino tiene un precioso opúsculo sobre las permite, cuando se hacen públicamente dejan de
este asunto, titulado De aeterna felicitate sanctorum. ser deshonestas. De esto deduce Barbeyrac que se
gun algunos doctores cristianos, la honestidad y la
Bigamia, Bigamo. Con frecuencia se ha acu deshonestidad, el bien y el mal dependen de una
voluntad de Dios puramente arbitraria.
sado en nuestros dias á los Padres de la Iglesia por la
severidad con que condenaron la bigamia ó las segun Si se reflecsiona sobre el pasage de Séneca que he—
das nupcias, bien de los hombres ó de las mugeres; se mos citado, se verá que Atenágoras habla de las se
han combatido los cánones que prohiben ordenará gundas nupcias segun se celebraban comunmente en
los bigamos, es decir, á los que sucesivamente habian relos paganos; y no sin razon querian los Padres de la
tenido dos mugeres, ó se han desposado con una viu Iglesia inspirará los cristianos horror hácia este des
da. Este rigor, dicen parece que imponia una nota orden. En cuanto al autor de la obra imperfecta so
de infamia á las segundas nupcias, que en su fondo bre S. Mateo es sabido que es justamente sospechoso
no son mas criminales que las primeras. Barbeyrac, de montanismo y de maquineismo, dos heregías que
Tratado de la moral de los Padres., c. , S. 15, etc. combatian la santidad del matrimonio en general; y
Siquisiesen acordarse de la depravacion que ecsis por la misma razon, Tertuliano condenó con tanto
tia en las costumbres del paganismo, conocerian me rigor las segundas nupcias cuando cayó en el mon
jor la sabiduria de los Padres y la disciplina de la lanismo. Mas la consecuencia que de aqui saca Bar
Iglesia. La licencia del divorcio habia hecho del ma beyrac es absurda, él mismo confiesa que el Evan
trimonio una verdadera prostitucion. El adulterio ser gelio condena muchas cosas que Dios permitió ó to
via de prenda para las segundas nupcias el mismo leró á los hebreos, como el divorcio; ¿pero se sigue de
Séneca nos lo dice, de Benef., lib. 1.° c. 9. Las se aqui que el bien y el mal moral dependan de una vo
guridades mas honradas, dice, son el adulierio, y en luntad arbitraria de Dios?
el celibato de los viudos ninguno tomaba muger sin Es falso que la bigamia se haya colocado en el nú
haberla quitado á su marido. mero de las irregularidades eclesiásticas , solo por
Para volver al matrimonio su santidad primitiva una razon mística, como se asegura en el Diccionario
era necesario inspirar á los fieles la mayor estima de jurisprudencia; lo ha sido por las razones que aca
cion á la continencia, ya en la virginidad, ya en el bamos de alegar.
estado de viudéz: no podia corregirse un esceso de
corrupcion sino con grande severidad. Si en esto hay Bisacraumentales. Nombre dado por algunos
algo digno de admiracion, es sin duda el poder de la teólogos á los hereges que solo reconocian dos sacra
moral cristiana que tuvo bastante fuerza para cam mentos, el Bautismo y la Eucaristia; tales son los
biar las ideas sobre un punto de la mayor importan calvinistas.
cia para las costumbres; y que una disciplina tan
austera haya podido establecerse en pueblos que an Blanchardismo. Algunos de los sacerdotes
les no daban mérito alguno á la castidad. Se diceque franceses refugiados en Inglaterra, yendo aun mas
estas ideas de una perfeccion quimérica pueden dis— allá que los obispos no dimisionarios (véase ANTI
minuir el número de matrimonios; y perjudicar á la coNCoRDATARios) y olvidando el respeto que se debe
poblacion. Lejos de producir el cristianismo este per al vicario de Jesucristo sostuvieron y propusieron la
nicioso efecto, hizo todo lo contrario. No es la santi guerra contra el Papa con ocasion del concordato del
dad de los matrimonios la que los hace estériles sino 15 de julio de 1801. -

su corrupcion. Sin las calamidades que eayeron so Blanchard, antiguo profesor de teologia y cura
 BLA 267) BLA -

en la diócesis de Lisieux, publicó en Lóndres suce rios en estas comarcas por medio de la corresponden
sivamente muchos escritos, en los que trataba de de cia seguida y de la remision de los escritos cismáti
mostrar la ilegalidad, la injusticia y la nulidad del cos de 1801á 181. En esta última época y en los
convenio y de las medidas adoptadas por la Santa años siguientes pasaron el Estrecho para volver á
Sede. Ponia á Pio VIl en oposicion con Pio VI, cuyos
- - - Francia un gran número de blanchardistas, y levan
decretos, decia, habian sido quebrantados por su suce taron alli altar contra altar. Entre los que mas par
sor, el que estableció una Iglesia cismática y herética: ticularmente se señalaron entonces por su ardor con
doctrina que º sí misma propendia á introducir el tra el concordato de 1801, debemos hacer mencion
cismº en la Iglesia y á sublevará los fieles contra el del abate Vimon, antiguo vicario de Santa Oportuna,
primero de los Pastores. en Poitiers, y del abate Fleuri, cura en otro tiempo
- Milner, obispo de Castabala, vicario apostólico del en la diócesis del Mans, que, puestos con ocasion
distrito del medio, señaló en una pastoral, dada el de sus escritos á disposicion de la policia correc—
prinero de junio de 1808, los estravios de los hom cional, fueron condenados á pena de prision en 1816.
bres atrevidos que provocaban un rompimiento, y Los blanchardistas hicieron muchos prosélitos en
condenó en la pastoral de 10 de agosto diez y seis los departamentos del Loir-et-Cher, Indre-et-Loire,
Proposiciones de los escritos de Blanchard, mandando Sarthe, Deux-Sevres, Vendée , Viena, Charente
que nº se les permitiese ejercer ninguna funcion de inferior, Dordogne, Arriega, Alla-Garona, etc. La
sacerdocio en el distrito del medio, saca o se pre imposibilidad de sostenerse por medio de la ordena—
sentaba en él. Blanchard agravó sus errores en e cion hizo desaparecer el escándalo de la pequeña
Wºs escritus. «Enseño, dijo, que los obispos no dimi iglesia, cuyo foco parece se hallaba en Poitiers.
sººarios sºn solo los obispos legítimos de Francia; Esta pequeña iglesia, asillamada por el corto número
2. "Que la Iglesia concordataria es herética, cisma de sus adictos comparativamente á la grande iglesia,
ica y está sometida á un poder humano: 3.º Que esto produjo diferentes sectas. No solo los unos confesaban
fue u efecto del concordato y de las medidas omadas que estaban subordinados al papa, al paso que otros
º Pº. Vºl. ..." En cuanto á este Papa solamente rehusaban reconocerle, sino que el abate Fleuri ha
digo que es necesario denunciarle á la lglesia cató— indicado cuatro subdivisiones de pequeñas iglesias, de
lica, sin especificar, sin embargo, si como herege ó las cuales la cuarta, mas numerosa, diseminada en
Como cismático, ó solo por haber violado las reglas varios departamentos, estaba presidida por un lego,
ººººº, y no lomo sobre mí la responsabilidad de que se decia el profeta Elias, santificado, como San
una denuncia, cuya necesidad anunció». Juan Bautista, desde el vientre de su madre. En
labiéndole puesto entredicho Douglas, obispo de Fougéres y sus alrededores, á los miembros de la pe—
Centuria, vicario apostólico del distrito de Lóndres, queña iglesia se les llama tambien Luisitos, sin duda
donde residía Blanchard, este pretendió eximirse de porque no quisieron reconocer ninguna ley posterior
la jurisdicion de aquel prelado, diciendo que no es al cambio hecho en el clero en tiempo de Luis XVI.
laba sujeto mas que á los obispos refugiados en In— A pesar de todo, los disidentes eran mucho menos
glaterra, doctrina nueva y contraria á todos los prin numerosos en Bretaña que en el Bocage de la Ven
cipios sobre jurisdicion. Algunos sacerdotes france dée, donde contaban entre sus adictos á municipali
SeS ¿ suyos fueron castigados con recogerles
las licencias. r dades enteras. En todas partes estaban perfecta
mente organizados; en todas partes tenian gefes.
Como Blanchard se valió del apoyo de los obispos Oponian grandes dificuttades á los matrimonios entre
irlandeses, diez y siete de estos firmaron el 3 de personas de diferente culto. En ciertas comarcas,
julio de 1809 una declaracion comun, en la que re como en el distrito de Bressuira (Deux ¿ ani
conocian á Pio VII por el supremo Pástor de la Igle mados los disidentes por un celo ecsaltado, hacian
sia católica, y se adherian á las disposiciones que largos viajes para ir á recibir en las iglesias, y hasta
habia lomado para salvar de su ruina á la Iglesia de en simples habitaciones, las instrucciones de sus sa
Francia; condenaban despues diez proposiciones de cerdotes, cuyo número no bastaba á sus necesi
Blanchard, especialmente como cismáticas y propa dades. -

ladoras del cisma. Esta decision, aprobada despues Aun cuando el blanchardismo se transplantó á
por otros doce obispos, llegó á ser la de todo el epis Francia, tambien se sostuvo en Inglaterra. La con -
copado de Irlanda. Por su parte los prelados católicos gregacion de la propaganda aprobó que Poynter,
de Inglaterra atajaron los progresos del error en el obispo de Italia, vicario apostólico del distrito del
brero de 1810, declarando que no concederian facul. Sud, mandase á todos los eclesiásticos franceses sus
tades á los sacerdotes franceses, como no reconocie cribir una fórmula muy breve y sencilla, en la que
seº que el papa no era herege ni cismático, ni autor, reconociesen estar en comunion con Pio VII , como
ni autor de la heregia ó del cisma. gefe de la Iglesia, y con los que comunicaban con él,
º abad Gaschel, mas atrevido que Blanchard, pre como miembros de la misma. Remitida esta fórmula
tendia, en el mismo tiempo, haber recibido el con en 13 de marzo de 1818, fué suscrita por algunos;
sejº de denunciar al papa como hereje y cismático. otros lo hicieron con restricciones, y otros, á cuyo
Declaraba que su émulo no era consecuente con sus frente estaba Blanchard, rehusaron firmarla. Pio Vll
Principios, rehusando confesar altamente conclusio aprobó, por su parte, esta fórmula en el breve del 16
nes: á las que directamente conducian sus escritos. de setiembre siguiente, y la hizo obligatoria á todos
Siendo la mayor parte de los sacerdotes emigrados los sacerdotes franceses que permanecian en In
en . Inglaterra, del norte, del oeste y del sudoeste glaterra.
de Francia, su infiltraron las opiniones d los escisiona En esta época Blanchard y sus adictos, adversa
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rios del concordato de 1801, combatian con nuevo 2. Que todos los que rechazaban la comtion con
vigor el de 1817, justificando con una oposicion do la Iglesia de Francia, rechazaban la comunion de una
ble y sucesiva, que tenian bien merecido el título de Iglesia reconocida por el Papa y por los obispos cató
anti-concordatarios. licos del mundo entero, como formando pal le de la
Ningun medio despreciaron los obispos, tanto en Iglesia universal.
Francia como en Inglaterra, para desengañará estos 3. Que todos los que hoy no quieren estar en co
rebeldes. Habiendo somelido al papa Mr. Bouillé, munion con la Iglesia de Francia, se separan posi
obispo de Poitiers, las reglas que seguia respecto de tivamente y de hecho de una parte de la Iglesia reco
los sacerdotes disidentes y de los fieles de su partido, nocida como ortodoxa y católica, no solo por Grego—
S. S. declaró por un breve del 26 de setiembre de rio XVI sino por los obispos católicos de todo el mun
1820, que sus procedimientos eran justos y ca do, sin esceptuar uno. Ahora bien, separarse de una
nónicos. iglesia como la Iglesia de Francia, de una Iglesia que
En 1822 se dirigieron los cismáticos á los Padres forma parte de la Iglesia universal, ¿no es separarse
del concilio nacional de Hungria, con la esperanza desgraciadamente de la Iglesia establecida por Jesu
de que esta asamblea se pondria de su parte; pero cristo que es una, santa, católica, apostólica? No es
guardó un silencio de desprecio sobre su carta. Es romper la unidad que este divinoSalvador pidió á su
cribieron tambien al obispo de Beardstown en los Padre para sus discípulos antes de su muerte?
Estados—Unidos, el que solo le contestó para instar— Ningun recurso pues queda á los disidentes sino el
les á que se sometiesen al romano pontífice. Aunque de volverá esta preciosa unidad fuera de la cual nin
rechazados por el episcopado de las diversas partes guno se salva. No les queda mas que confesar y de
del mundo, resistian á la voz de la autoridad, hasta clarar que están en comunion con Gregorio XVI, ca—
que un rescripto de 17 de enero de 1824, dirigido al beza visible de la Iglesia, y vicario de Jesucristo en la
obispo de llalia, mandó á los sacerdotes franceses, tierra. y declarar que Pio VII fue gefe visible de la
residentes en Inglaterra, que suscribiesen la fórmula Iglesia desde el instante de su elevacion al pontifi—
siguiente, modificada por el advenimiento de un cado hasta su muerte; declarar ademas y profesar que
nuevo pontífice: «Reconozco y declaro, que me so— están en comunion con todos los que, como miembros
meto al pontífice Leon XII como al gefe de la Iglesia,de la Iglesia, lo estuvieron con Pio VII y siguen en la
y que comunico, como con miembros de la Iglesia, misma con Gregorio XVI. V. CLEMENTINos.
con todos los que han estado en comunion con Pio VII
hasta su muerte, y hoy estan unidos en comunion Blasfemador. El que dice una blasfemia. Este
con el papa Leon XII, confieso que Pio VI fue crimen se ha castigado siempre con severidad por la
gefe de la Iglesia todo el tiempo que vivió desde su justicia humana, tanto en la ley antigua como en el cris
elevacion al pontificado». lianismo. Entre los judíos los blasfemos eran castiga
Este rescrito enuncia del modo mas claro y mas dos con la muerte. Lee, c. 24. Por la mala aplicacion
preciso el juicio de Leon XII sobre el desgraciado de esta ley fue condenado á muerte Jesucristo, por—
cisma, movido por los que rehusaron declarar que que decia que era el Hijo de Dios. Mat. c. 26 y . 66.
estaban en comunion, ya con Pio VII, ya con la Las leyes de S. Luis y de otros muchos de nuestros
lglesia actual de Francia, y sugiere dos reflecsiones reyes condenan á los blasfemos á ser puestos en la pi
muy poderosas. - cola y á que se les agugeree la lengua con un hierro
La primera es, que al tiempo de la muerte de hechó ascua por mano del verdugo. Pio V, en los es
Pio VI, la Iglesia católica entera, de un estremo del tatutos dados sobre esta materia en f566, condena á
mundo al otro, dió una prueba brillante é incontes los blasfemos por la primera vez á una correccion, y
table de que siempre estuvo en comunicacion con á ser azolado por la segunda si el criminal es lego; si
este pontífice, puesto que en todas las partes del fuese eclesiástico, dice este pontífice, que á la tercera
mundo se ofreció espontáneamente el sacrificio de la vez se le degrade y envie á galeras. En el dia la
misa por el descanso de su alma. pena mas frecuente es la correccion infamatoria y el
La segunda es, que en la época en que se propuso destierro.
la suscricion de la primera fórmula, es decir, en Los incrédulos de nuestros dias deben felicitarse de
1818, es evidente y de notoriedad pública que to que estas leyes no son ejecutadas; nadie ha proferido
dos los obispos de i, Iglesia católica, de esta Iglesia mas blasfemias que ellos contra Dios, como Jesucris
esparcida en todas las naciones, estaban en comu to, y contra todos los objetos denuestro culto; mas para
nion con la Iglesia de Francia, la cual lo estaba ejecutar estas leyes á la letra, seria necesario casti
tambien entonces con Pio VII. Ahora bien, estos mis gar un número considerable de culpables.
mos obispos de la Iglesia católica, esparcidos en todas
las naciones del mundo, estan de hecho en comunion Islasfematorio. Lo que contiene óespresa una
con la Iglesia actual de Francia, la que hoy está blasfemia. Se llama asi cuando se califica una propo
en comunion con Gregorio XVI, sucesor legítimo de sicion que atribuye á Dios una conducla conlraria á
Pio VIII, por este de Leon XII, y por Leon XII de sus divinas perfecciones, y que es capaz de disminuir
Pio VII. el respeto que debemos á su Magestad suprema. Asi
De todo esto se sigue necesariamente 1.” que todos es que la quinta proposicion de Jansenio concebida en
los que en 1818 rechazaban la comunion con Pio VII, estos términos: Es un error semipelagiano el decir
rechazaban la comunion de un Papa que la Iglesia ca que Jesucristo ha muerto y ha derramado su sangre
tólica entera reconocia como su ¿? visible; y como por todos los hombres, entendida en el sentido que Je
vicario de Jesucristo en la tierra. sucristo no ha muerto mas que para la salvacion de .
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los predeslinados, se ha declarado blasfematoria en conveniente á su profesion, se entreguen á bailes rui
la condenacion que hizo de ella el Papa Inocencio X. dosos y lascivos.» S., Juan Crisóstomo predicó mas de
Efectivamente, esta proposicion no solo supone que una vez contra los desórdenes á que muchos cristia.
Jesucristo ha faltado á la caridad para con un gran nos se entregaban en estas circunstancias. Bingham,
dísimo número de hombres, sino que nos ha engañado orig. ecles. l. 22, c. . S. 8.
haciéndose llamar Salvador del mundo, cordero de Muchos concilios han prohibido á los eclesiásticos
Dios que quita los pecados del mundo, víctima de asistir á los festines de las bodas; otros solo les han
propiciacion por los pecados del mundo entero, etc. mandado retirarse antes del fin de la comida, cuando
El cardenal de Lugo distingue dos clases de propo la alegría empieza á ser demasiado bulliciosa. En las
siciones blasfematorias: unas que á la blasfemia aña parroquias del campo, muchos párrocos acostumbran
den una heregía claramente manifestada, y otras en á asistir á las bodas cuando son invitados, porque
las que la heregía no está terminantemente espresa. están seguros de que su presencia contendrá á los
Disp. 20, de fide sect. 3, n. 100. convidados, y evitará todo lo que sea indecoroso. Los
Hay pocas heregías que no lleven tras s consecuen que tienen feligreses menos dóciles y menos respetuo
cias blasfematorias, consecuencias injuriosas á la bon sos, se retiran para que no parezca que aprueban lo
dad, á la justicia, y á la santidad de Dios Decian los que pudiera suceder contrario al buen órden. Todos
¿ mas antiguos que temian el blasfemar, supo— merecen alabanza por sus razones y conducta segun
las circunstancias.
niendo que el Hijo de Dios habia estado sujeto á las
miserias y padecimientos de la humanidad; pero vol BODAS (SEGUNDAS.).V. Big AMIA, BIGAMo.
vian á caer en este precipicio, diciendo que no tenia
sino un cuerpo fantástico, y que para engañarlos ha— Boecio. No podemos dispensarnos de colocar cn
bia hecho ilusion á los sentidos de todos los hombres. el número de los escritores eclesiásticos á este hom—
Los arrianos blasfemaban sosteniendo que el Hijo bre célebre por sus talentos, por sus virtudes y por
de Dios era una simple criatura; los maniqueos di sus desgracias. Despues de haber sido elevado al col—
ciendo que el Dios bueno se habia visto obligado á mo de los honores, y haber gozado de una prosperi
permitir el mal producido por el principio malo; los dad brillante bajo Teodorico rey de los godos, acabó
pelagianos esplicando la redencion en un sentido me— su vida en un suplicio el año 525, porque procuraba
tafórico; los defensores de los decretos absolutos de sostener la dignidad del senado de Roma, contra el
predestinacion y reprobacion atribuyendo á Dios una despotismo de este rey.
conducta odiosa y tiránica, etc., suponiendo todos que oecio habia escrito un tratado teológico contra los
Jesucristo no se ha dignado velar por su Iglesia, para errores de Eutiques y de Nesterio, y otro sobre la
preservarla del error. Trinidad, en los que sostenia el dogna católico. En
su consuelo de la filosofía que compuso en la cárcel
Blasfemia. En general se llama asi todo dis— habla dignamente de la presciencia y de la provi
curso ó escrito injurioso á la Magestad divina; pero dencia de Dios. La mejor edicion de sus obras es la
en el uso ordinario se entienden especialmente por de Leyden con notas variorum, en 8." en 1671.
esta palabra los juramentos é impiedades contra el
santo nombre de Dios. Dicen los teólogos que la blas— Bogarmilas, bogomilas, ó bo un goma i
femia consiste en atribuirá Dios una cualidad que no las. Secta de hereges nacida de los maniqueos 0 pau
le conviene, ó en quitarle alguno de los atributos que licianos; segun otros de los masalianos que se dieron
le convengan. Segun S. Agustin toda palabra inju á conocer en Constantinopla á principios del siglo XII,
riosa á Dios es una blasfemia: Jam vero blasphemia bajo el reinado de Alejo Conmeno. Su nombre, segun
non accipitur, nisi mala verba de Deo dicere. De morib. Ducange, se deriva de la lengua bulgara ó esclavona,
Manich. lib. 2 c. 1 1. en la que bog significa Dios, y milei t ned piedad;
Es pues una blasfemia el decir, por ejemplo, que designaba á los hombres que se entregaban á la mi
Dios es injusto ó cruel. Hay pues heregías que no dan sericordia de Dios.
lugar á las blasfemias: toda opinion falsa con respec— Bajo este dictado muy conveniente enseñaban los
to á la naturaleza de Dios ó á la conducta de su pro bogomilas una doctrina impía, y unian una parte de
videncia lleva infaliblemente consecuencias injurio los errores de los maniqueos á los de los masalianos”
sas á Dios. ó enquitas. Decian que no era Dios el que habia eria
do el mundo sino un demonio malo; que Jesucristo
Bodas. Festin que se tiene en la celebracion de no tuvo sino un cuerpo fantástico. Negaban la resur
un matrimonio. Jesucristo se dignó honrar con su pre reccion de los cuerpos, y no admitian mas que la
sencia las bodas de Canaan, para demostrar que no resurreccion espiritual por la penitencia. No adinillan
desaprobaba la alegria inocente á que se suelen en— el antiguo Testamento, escepto siete libros, ni la Eu
tregar en esta ocasion; hizo en ellas él primero de sus caristía y el sacrificio de la misa; sostenian que la
milagros cambiando el agua en vino. Véase CANAAN. oracion ¿ que era su único rezo, era tambien
A su ejemplo los concilios y los Padres no han conde la única Eucaristía. Despreciaban las cruces y las
nado la pompa y la modesta alegría que los fieles sue imágenes; aseguraban que el bautismo de los calóli—
len manifestar en sus bodas; pero siempre han man cos no era sino el bautisino de S, Juan, y que solo
dado alejar de ellas toda clase de escesos, y lodo lo que ellos administraban el bautismo de Jesucristo, con -
se resintiese de costumbres paganas. «No conviene, di denaban el matrimonio. Se les atribuyen tambien
ce el concilio de Laodicea, que los cristianos que asis otros errores sobre el misterio de la Santsima Trini
ten á las bodas, en vez de tener una comida modesta y dad. Uno de sus gefes llamado Basilio, médico de
T) M) l, 0
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profesion, quiso mas dejarse quemar en Constantino rios de un tal Jacob Bohm, que murió en 162%; ha
pla que abjurar sus errores. Se ha escrito la historia dejado muchos escritas místicos, llenos de una teo
de los bogomilas por un profesor de Wurtemberg en logía obscura é ininteligible.
1711. Véase Baronio ad an. 1118; Spondo, Eutimio,
Ana Conmeno, Sandero, Haeres, 138, etc. Bolandistas, continuadores de Bolando, sábios
Despues, estos hereges fueron conocidos con el nom jesuitas de Amberes, que hace mas de un siglo se han
bre de bulgaros, porque se hallaban en bastante nú ocupado en recoger las actas y las vidas de los san
mero en la Bulgaria, en las orillas del Danubio y del los, segun los autores originales, y asi han logrado
mar , negro; penetraron en Italia, sobre todo en la ilustrar muchos hechos importantes de la Historia
Lombardia; hicieron mucho ruido en Francia con el eclesiástica y civil.
nombre de albigenses, y en Alemania con el de cata Este útil y vasto proyecto fué formado á principios
ros; ninguna secta ha tenido mayor número de nom del siglo XVII por el P. Heriberto Rosweid, jesuita
bres diferentes. Véase la historia de las variaciones de Amberes; pero luego se conoce que era muy su
por Bossuet, lib. 11. Parece que en los diversos pun perior á las fuerzas de un hombre solo; el P. Rosweid
tos en que se estableció y en los diferentes siglos, no no pudo hacer mas, durante su vida, que reunir los
siempre conservó esactamente los mismos dogmas, materiales, murió en 1629, sin haber empezado á
¿cómo hubiera podido conservarse la unidad de la darles forma. -

doctrina, en medio de entusiastas ignorantes de dife Al año siguiente su co-hermano el P. Juan Bolan
rentes naciones y de diversos caracteres? do, volvió á empezar este intento bajo otro punto de
vista, y se propuso redactar él mismo las vidas de
* Bohemios, pueblo errante, esparcido en la los santos, segun los autores originales, añadiéndoles
superficie de Europa, que con los nombres de hohe notas semejantes á las que los editores de las Padres
mios ó egipcios en Francia, de Zigenner en Alema han acompañado á sus obras, ya para ilustrar algunos
nia, de Gypsy en Inglaterra, de gilanos en España y asajes obscuros, ó para distinguir lo verdadero de
de Zingari en Italia, recorre todos los paises, vivien— o fabuloso. En 1635 se asoció con el P. Godofredo
do al raso, con las habitudes y costumbres de los mas Hensquenio y en 163 dieron á luz las actas de los
rústicos salvajes, esplotando sucesivamente con la santos del mes de enero en dos volúmenes en folio. El
astucia de sus truanerías ó con la buena ventura la buen écsito que tuvo este libro se aumentó, cuando
curiosidad ó la credulidad del vulgo. A estos bohe— en 1658 estos dos sabios dieron otros tres volúmenes
mios que se supone abandonaron hace cuatro siglos en la misma forma, que contenian las actas de los
los alrededores del Delta de Indo, parece que les son santos de febrero. Bolando se habia asociado tambien
indiferentes todas las creencias. Cambian tantas ve— en 1650 con el P. Papebrok, y trabajó para dar el
ces de culto como de patria adoptiva, y muchos se mes de marzo hasta que murió en 1665.
han circuncidado sucesivamente entre los mahome— Luego que murió Hensquenio, el P. Papebrek tuvo
lanos, y bautizado entre los cristianos. Despues de su la principal direccion de esta obra, y sucesivamente
primera aparicion en Europa, se hicieron tener por tomó por colaboradores á los PP. Baér, Janing, Du
cristianos de Egipto, y contaban que no habiendo solier y Raie, y han publicado 2 volúmenes que con
querido sus mayores recibir á Jesucristo cuando hu tienen las vidas de los santos hasta el mes de junio.
yó á Egipto con sus padres, fueron condenados por Despues de la muerte del P. Papebrok acaecida en
esta falta á siete años de una vida errante. La iglio 171, continuaron la obra los PP. Dusolier, Cuperr,
rancia de los tiempos hizo que se admitiese esta fá Piney y Roque, y sucesivamente han dado á luz las
bula, y aun obtuvieron savo-conductos, y se les reci actas de los santos de los meses siguientes. Esta co
bió por todas partes con hospitalidad. Pero descu leccion inmensa contiene en la actualidad mas de 50
bierta la falsedad, y haciéndolos indignos su conduc— volúmenes en folio. Estuvo interrumpida algunos años
ta de la tolerancia que antes se habia tenido con ellos, por la supresion de la compañía de los jesuitas; pero
se les desterró de la mayor parte de los paises en que se continuó algunos años despues con la proteccion y
habian penetrado. Un decreto dado en los estados de beneficios de la difunta reina emperatriz.
Orleans en 1561, ordenaba fuesen esterminados á Se le ha echado en cara á Bolando el no haber sido
sangre y fuego sino abandonaban el territorio fran bastante cuidadoso contra las leyendas apócrifas y fa
cés; sin embargo, fué imposible el espulsarlos ente— bulosas; Papebrok y sus continuadores han tenido una
ramente. Estos seres desgraciados sin religion, sin crítica mas ilustrada y esacta en la eleccion de los
conocer el matrimonio, que han llegado al último gra monumentos de que se han valido.
do de degradacion moral, han resistido á las tenta El primer cuidado, desde el principio de su traba
tivas que se han hecho siempre para civilizarlos. Este jo fue el establecer correspondencia con todos los
ejemplo mas hay que añadir á los que nos presen sabios de Europa, y de buscar en los archivos y en las
tan el Africa y la América, de la imposibilidad casi bibliotecas los escritos y monumentos que pudieran
completa de mejorar la suerte de los salvajes, en ge servirles á su intento; los materiales reunidos forman
neral, por solo los medios que posee la civilizacion. una biblioteca considerable.
Solo el cristianismo pondrá en su alma el movil de Antes de hacer uso de ningun instrumento, los bo
landistas examinaron su autenticidad, el grado de
todos los progresos y su regeneracion social no pre
cederá, pero seguirá inmediatamente á su regeneraautoridad que pudiese tener, y lo desechaban absolu
cion moral. lamente si descubrian indicios de suplantacionó al
sedad; si lo tenian como verdadero, lo publicaban
Bolamistas. Asi se llaman en Sajonia los secta tal como estaba con la mayor fidelidad é ilustraban
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con notas los lugares oscuros; si era un retazo dudo— c. 11, ?. 21, el uno tiene hambre y el otro está em
so esponian los motivos de la duda, y si no tenían briagado, quiere decir que el uno está falto de ali
mas que estractos hacian de ellos una historia seguida. mentos y el otro completamente satisfecho. En el estilo
Cuando reconocian estos sabios críticos que se ha— de los hebreos, embriagar á alguno es colmarle de
bian engañado, ó que los habian inducido á error, bienes. Ps. 35, y. 9, David dice á Dios, hablando de
nunca dejaban de advertirlo en el siguiente volúmen los justos: «Serán embriagados con la abundancia de
ybuena
de rectificar la equivocacion con toda la candidez y º Vuestra casa, y vos les inundareis con un torrente
fé posible. » de delicias.» Pero cuando S. Pablo dice á los de
Se hallan con frecuencia en esta obra importante Efeso, c. 5, y 18: «No os embriagueis por el esceso
rasgos que no solo interesan á la historia eclesiástica del vino»; fácilmente se comprende que se trata de
sino lambien á la historia civil, la cronología, la geo la borrachera propiamente dicha.
grafía, los derechos y las pretensiones de los sobera—
nos y de los pueblos; van acompañados todos los vo Borrelistas. Stoupp, en su tratado de la reli
lúmenes de tablas exactas y muy cómodas. gion de los holandeses, habla de una secta de este nom
El cuidado que tienen estos escritores laboriosos bre, cuyo gefe era Adon Borell, zelandés, que tenia
de crear continuadores, ¿ indicar al público que algun conocimiento de las lenguas hebrea, griega
este inmenso proyecto algun dia será llevado á cabo. y latina. Los borrelistas, dice este autor, siguen en
Como se hicieron muy raros los volúmenes dados por general las opiniones de los mennonitas, aunque
Bolando, se ha reimpreso en Venecia toda la colec— no concurren á sus juntas. Su vida es muy austera;
cion; pero esla edicion no es tan buena como la de emplean una parte de sus bienes en hacer limosnas.
Amberes.
Tienen aversion á todas las iglesias, al uso de los
La coleccion de las Acta sanctorum, interrum— sacramentos, á las oraciones públicas y á todas las
pida por la revolucion, se continúa en la actualidad. demas funciones esteriores del servicio de Dios. Dicen
El gobierno belga ha pasado á los jesuitas una suma ¿ todas las
iglesias que existen en el mundo han
¿ los habilila
etenidos en 1
para volver á empezar los trabajos
de octubre.
egenerado de la doctrina pura de los apóstoles, por—
que han permitido que la palabra de Dios fuese espli
Ya no se hacen como antiguamente en Amberes, cada y corrompida por doctores que no son infalibles,
sino en Bruselas, y los nuevos bolandistas residen en y que quieren hacer pasar por inspirados sus cate—
el colegio de S. Miguel. Los PP. Boone, Van—der cismos, sus confesiones de fé, sus liturgias y ser—
Moeren y Coppens se han unido á algunos jóvenes re mones, que son obra de los hombres. Los borre
ligiosos, con los que continúan la obra de sus prede listas pretenden que solo debe leerse la palabra
cesores. de Dios, sin añadirla ninguna esplicacion de los
hombres.
Bondad. W. BUENo.
Braquitas. Secta de hereges que aparecieron
Bonaosia cos ó bonosilenos. Nombre de una en el siglo III. Seguian los errores de Manés y de los
secta que Bonosio, obispo de Macedonia, renovó en gnósticos.
el siglo IV. Sostenia como Photin que Jesucristo no
era Hijo de Dios sino por adopcion, y que María su Brandeum. V. RELIQUIAs.
madre habia dejado de ser vírgen en el parto. El
papa Gelasio condenó estos dos errores. Breve apostólico. , Carta dirigida por el
papa á los particulares ó á las comunidades para
Borboritas. Secta de gnósticos, la que ademas concederles dispensas o indulgencias, ó simplemente
de los errores y del libertinaje comun á todos los he para darles muestras de afecto. Estas cartas van fir
reges conocidos con este nombre, negaba tambien, madas por un secretario de los breves ó por el car—
segun Filastrio, la realidad del juicio final. S. Epi denal penitenciario.
fanio Haeres. 25 y 26; S. Agustin de Haeres. c. 5; Se llama tambien breve, ordo ó directorio el libro
Baronio, ad an. Chr. 120. que contiene las rúbricas, segun las cuales se debe
rezar el Oficio todos los dias del año.
Borrachera ó embriaguez. Esta palabra
en la Sagrada Escritura no significa siempre el estado Breviario. V. OFIClo DIVINo.
de un hombre que ha bebido con esceso, sino el del
que lo ha hecho hasta la saciedad, y la alegria en una Erovvunistas. Nombre de una secta que se
comida de amigos. En el Gén., c. 3, y. 3, se dice formó de la de los puritanos á fines del siglo XII
que los hermanos de José se embriagaron con él la en uerra ; se denominó asi por Roberto Brown,
segunda vez que le vieron en Egipto; y esto tan solo Su rel62.
significa que fueron regalados espléndidamente en su ierto Brown era de una familia bastante buena
mesa. Una sentencia del libro de los Prov., c. 11, de Rutlandshire, y pariente del lord tesorero Burleigh.
y.25, es, «que aquel que embriaga será embriagado», Hizo su carrera en Cambridge, y empezó á publi
es decir, que el hotubre liberal será recompensado car sus opiniones y á, declamar contra el gobierno
liberalmente. Hay otra, Deuter., c. 29, y 19, que eclesiástico en Norwich en 1580, lo que le atrajo el
dice, que el hombre embriagado destruirá al liene resentimiento de los obispos. Se alababa él mismo de
sed; esto significa que el rico oprimirá al pobre. haber sido encarcelado por esta causa en treinta y
Cuando sat: Pablo dice á los corintios, Epíst. 1.", dos prisiones diferentes, tan oscuras que no podia
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distinguir la mano aun en medio del dia. A conse clase de hechos está atestiguada por testigos ocula
cuencia de esto salió del reino con sus sectarios, y se res y tan instruidos como lo era Tournefor: lo mismo
retiró á Middelbourgo en Zelandia, en donde él y sus acontece con las de los aparecidos que corren entre
adictos obtuvieron de los Estados el permiso de edi— nosotros. Por espacio de muchos siglos ha habido la
ficar una iglesia, para servir á Dios en ella á su ma costumbre en nuestros climas de no enterrar los es—
nera. Poco tiempo despues se dividieron entre sí. Se comulgados, sino arrojar sus cadáveres á los mula
separaron muchos; lo que disgustó de una manera dares, cubrirlos de piedras ó encerrarlos en un tronco
¿? Brown, que dimilió su encargo, y volvió á In viejo de árbol. Véase Ducange en la palabra Imbloca
glaterra en 1589, en donde abjuró sus errores, y fue tus; dom Calmet. Discurso sobre los aparecidos, n. 38
nombrado rector en una iglesia de Northampthons y sig.; Lenglel, Tratado de las visiones y apariciones,
hire, en donde murió el año 1630. tomo 2, p. 171, etc.
El cambio de Brown ocasionó la ruina de la iglesia EBrutos. Véase ANIMALEs.
de Middelbourgo; pero las semillas de su sistema no
pudieron destruirse fácilmente en lnglaterra. Sir Budismo ó boudismo. El Budismo y el
Walter Ralcigh, en un discurso compuesto en 1692, Brahmanismo son las religiones esparcidas en la In—
cuenta hasta veinte mil personas imbuidas en las opi dia, en la isla de Ceilan y en los reinos de Ava y de
niones de Brown. Siam. V. IND1As.
Sus sectarios rechazaban toda especie de autoridad Bouddha, adorado bajo el nombre de Fo en el reino
eclesiástica; querian que el gobierno de la Iglesia fue. del centro, bajo el de Sammonokodom entre los sia
ra enteramente democrático. Entre ellos el ministe meses, es siempre el mismo en sus numerosas deno
rio evangélico era una simple comision revocable; minaciones; y el Dala-Lama (véase esta palabra).
cada uno de los miembros de la sociedad tenia el de su representante ejerce la autoridad sacerdotal sobre
recho de hacer exhortaciones y preguntas acerca de una cuarta parte, quizá, del género humano.
lo que se habia predicado. El Budismo se remonta á muchos años antes de
Los independientes que se formaron despues de en nuestra era; su nombre y el de sus discípulos, los sha
tre los brownistas adoptaron parte de sus opiniones. maneos, seencuentran en los autores de la antigüedad,
La reina Isabel persiguió vivamente esta secta. En lo que destruyen las teorias que atribuyen á la in
su reinado, se llenaron las cárceles de brownistas, y fluencia de los nestorianos y de los maniqueos una
aun algunos fueron ahorcados. La comision eclesiás— parte de los dogmas de que se compone esta doctrina.
tica y la cámara estrellada los persiguió con tanto La India, ese pais voluptuoso que ha producido tan
rigor que se vieron obligados á abandonar la Ingla numerosos y estravagantes sistemas, parece ser lam-.
terra. Muchas familias se retiraron á Amsterdam, en bien la madre del sistema budico. Delpais de oennoe
donde formaron una iglesia y eligieron por pastor á ttkoek, es decir, de la India, es de donde los Kalmouks
Johnson, y despues de él á Ainswort, conocido por (véase esta palabra) pueden haber recibido sus creen
un comentario sobre el Pentateuco. Entre sus gefes cias. Grandes congetoras históricas, asi como la ar
se cuentan Barrow y Wilkinson. Su iglesia duró cer monía que existe entre las doctrinas de Brahmes y
ca de cien años. las de Bouddha vienen en apoyo de esta asercion.
Nuestras congeturas se fundan sobre la mucha an
Brueolacas, término formado del griego mo tigüedad atribuida á las ideas brahmánicas por los
de lo Roukos lodo hediondo y Lakkos, fosa, fosa escritores indios y estrangeros; sobre su existencia
llena de lodo; los griegos modernos llaman asi á los hace mas de dos mil años, desde Alejandro, rey de
adáveres de los escomulgados. Estan en la persuasion Macedonia, hasta nosotros; y por último acerca del
de que estos cadáveres no pueden disolverse; que el entusiasmo que la sabiduria de la India inspiraba en
denonio se apodera de ellos, los anima, los hace apa Asia y Europa á tal punto que los mongoles podian
recer, y se sirve de ellos para aterrar y atormentar facilmente tener su parte en él.
á los vivos; que el único medio de librarse de ellos La sorprendente armonia que existe entre las dos
es el de desenterrar al muerto, arrancarle el corazon doctrinas se demuestra por una parte en las ideas
y hacerle pedazos, ó quemarle completamente, en— cosmogónicas en que se fundan, y por otra en los dog
contrándose por lo general la fosa llena de lodo. Di mas principaies, como la caida de los espíritus y de
cen que muchas veces se encuentran estos cuerpos los hombres, la emigracion de las almas, las penas y
inflados, llenos de aire y tienen un sonido como el las glorificaciones futuras, y por último en una mul
tambor, en este caso los denominan TzoUp y ó EToUPy titud de prácticas religiosas esparcidas entre los in
tambor. Por último creen que la absolucion dada por dios, los thibelanos y los mongoles que apenas pre
sus obispos ó su papa á los escomulgados despues de sentan entre sí la menor divergencia.
su muerte, hace reducirse á polvo los cadáveres. Esta
persuasion, autorizada entre ellos por una infinidad Bueno, Ibon dad. Es nno de los atributos de
de h storias, les hace temer estraordinariamente la Dios que mas conocemos, y del que nos hablan mas
escomunion, confirmándolos er, su cisma. los libros santos. David repite contínuamente en los
Tournefort, en su viage al Lecante, t. 1.ºp. 52 y salmos: Alabad al Señor, porque es bueno y porque su
sig. cuenla un caso de exhumacion de un esco— misericordia es eterna. Dios hace mas ó menos bien á
mulgado, del que fue testigo en la isla de My con en todas las criaturas; no existe alguna que no reciba
1701: no vió otra cosa nas que los efectos de una beneficios; su bondad está, pues, probada por los efec
imaginacion exaltada y del fánatismo de un pueblo tos. No hace tanto cual pudiera; su poder es infinito,
ignorante. Ninguna de las historias que refieren esta y las criaturas no son susceptibles mas que de una
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porcion limitada de bien. No les hace tantos cuantos feccion; son perfectas cuando corresponden al uso á
desean, porque sus deseos no tienen límites, y con fre que Dios las tiene destinadas. Mas los términos de per
cuencia no estan en armonía con la razon. No se los feccion é imperfeccion son términos puramente relati
concede á todos con igualdad; la desigualdad es el vos; no hay mas perfeccion absoluta que la de Dios;
fundamento de la sociedad y de nuestros deberes mú la imperfeccion absoluta es la nada.
tuos; la sabiduría de Dios preside á la distribucion de La bondad moral de los seres inteligentes es la in
sus dones, y su justicia no pide cuenta á cada uno clinacion á hacer bien; la bondad moral de sus accio
mas que de lo ¿ le ha dado. nes es la conformidad de estas acciones con la regla de
De esto se deduce tambien que las nociones de la las costumbres y con la voluntad de Dios, soberano
bondad humana no pueden aplicarse á la bondad di legislador. V. BieN y mal moRal.
vina, porque la primera vá unida á un poder muy li
mitado, y la segunda á uno infinito. Un hombre no Bue naventura (san) Religioso, francisca
es reputado bueno sino cuando hace tanto bien como no, obispo de Albano y cardenal, murió el año 127;
puede; lo proporciona al momento al mayor número fué uno de los mas célebres teólogos escolásticos del
de personas, y continúa haciéndolo siempre que le es siglo XIII. Es tan respetado entre los franciscanos
posible. Ninguno de estos caractéres es aplicable á la como Santo Tomás de Aquino entre los dominicos.
bondad de Dios. En 1668 se imprimieron sus obras en Lyon, en ocho
Es un absurdo el ecsigir que Dios haga el mayor volúmenes en folio. Los dos primeros contienen unos
bien que pueda: lo puede hacer hasta el infinito; que comentarios sobre la Sagrada Escritura; el tercero los
lo haga prontamente: lo pudo hacer desde toda una sermones; los dos siguientes son un comentario sobre
eternidad; que lo haga al mayor número de criaturas el Maestro de las sentencias, y por consiguiente un cur
posible: puede crearlas hasta el infinito; que lo haga so de teología: el sesto y sélimo contienen tratados de
por todo el tiempo posible: puede continuar hacién moral y de piedad, y el octavo unos opúsculos sobre
dolo por toda la eternidad. la vida religiosa, en los que se lamenta amargamente
Se deduce tambien que la nocion de bondad infinita de la relajacion que se habia introducido entre los
nos nos viene de las criaturas, porque Dios no ha franciscanos á los treinta años despues de la muerte
derramado sobre ellas mas que una porcion de bie de San Francisco. A San Buenaventura se le denomina
nes muy limitada, por consiguiente, mezclada de ma el doctor seráfico; unió á las virtudes de un perfecto
les ó privaciones; esta nocion se saca directamente de religioso conocimientos raros para su siglo. Véase la
la de ser necesario que ecsiste por sí mismo, cuyos atri historia de la iglesia galicana, tom. 12, lib. 3, año
butos no pueden ser limitados por ninguna causa. Mas de 1272.
la revelacion nos dá á conocer la bondad de Dios mu
cho mejor que la razon. Buenos—hombres. Religiosos establecidos en
Los que dicen que el estado actual de las criaturas el año 1259 en Inglaterra por el príncipe Edmundo:
no es tan ventajoso para que pueda atribuirse á un profesaban la regla de San Agustin y llevaban el há
Dios infinitamente bueno, deberían fijar de una vez el bito azul. Spondo es de opinion que seguian el insti
grado de bienestar á que podian llegar las criaturas tuto del bienaventurado Juan Lebon, que vivia en
para que no tuviesen motivo de queja; ninguno de aquel siglo. En Francia se denominaban asi los mí.
esos filósofos nos lo ha consignado hasta ahora. Dios, nimos, á causa del nombre de buen—hombre que Luis XI
dicen, podria hacernos felices y contentarnos; nos tenia costumbre de dar á San Francisco de Paula su
otros no lo estamos: pero nos encontrariamos en ese fundador. Los albigenses afectaban tambien ser lla
estado si fuéramos sabios, lo que solo depende de nos mados buenos- hombres. Véase á Polidoro Virgilio,
otros mismos. Hist. Anglic. lib. 16; spondo año 1259, num 9.
Job, en el colmo de la miseria, atenido tan solo á
su pajar estaba contento y bendecia á Dios; Alejandro Bula. Rescripto del soberano pontífice. No ha
poseedor de una gran parte del mundo, no lo estaba. blaremos mas que de las bulas dirigidas,á toda la
El corazon del hombre es demasiado grande para que Iglesia para conceder á los fieles la indulgencia del
se crea feliz con la posesion de los bienes de este jubileo, ó para condenar errores en punto á doctrina,
mundo. las que se espiden para el nombramiento de benefi
¿Acusaremos á Dios de no ser bueno porque castiga cios pertenecen á los canonistas.
el crimen en este mundo ó en el otro? Por el contrario Las bulas de indulgencia para el jubileo se dife
dejaria de ser bondadoso si no recompensara la virtud y rencian de los breves ordinarios de indulgencia en
no castigara el crímen. En él la bondad no perjudica á que las primeras van dirigidas á todos los fieles, con
la justicia, y la justicia no deroga en nada la miseri ceden á todos los que cumplan con las condicio
cordia. nes prescritas una indulgencia, plenaria, á todos los
Las comparaciones, siempre defectuosas entre la confesores aprobados la facultad de absolver de casos
bondad divina y la bondad humana, nos dan falsas reservados, conmutar votos simples, etc. En Francia
nociones de la bondad divina, asi como el abuso está en uso el que estas bulas sean revisadas por los
de los términos de bien y mal, de felicidad y de des obispos, y dirigidas por ellos á sus diocesanos. Véanse
gracia, que sirven de fundamento á todos los sofismas INDULGENCIA, JUBILeo.
de los filósofos antiguos y modernos sobre la grande Las bulas concernientes á la doctrina son tambien
cuestion del orígen del mal. V. AL. dirigidas á todos los fieles, y se entienden tambien
BUEN0. Hablando de las criaturas, tiene un do muchas veces bajo el nombre de constituciones. De
ble sentido. Su bondad física es lo mismo que su per terminan el juicio que ha recaido por el soberano
 BUL 27 BUL
v.

pontífice, sobre la doctrina que le ha sido denuncia general estableció su demanda, y el parlamento orde
da. Cuando son acepladas ya por una declaracion nó que todos los arzobispos y obispos que hubieran
formal de los obispos, ya por su asentimiento tácito, ¿ilio esta bula, y no la hubiesen publicado, la re
son consideradas como el sentir de la Iglesia univer mitieran á la corte; que los que la hubieran publica
sal; tiene fuerza de ley dogmática, como si este jui do fueran emplazados, y secuestradas sus tempora
cio hubiera sido acordado en un concilio general. La lidades; que el que se opusiera á este decreto fuese
reclamacion aun de un pequeño número de obispos, reputado como rebelde y reo de lesa magestad. Che
opuesta á la aceptacion de sus cohermanos, nada va zerai Historia de Francia, bajo el reinado de Enri—
le contra la decision, del mismo modo que su oposi— q ueElIII.
Papa Clemente XIV suspendió la publicacion
cion en un concilio no prevaleceria en contra del voto
del mayor número. de esta bula en 1773; es de presumir que el temor
Los obispos establecidos por Jesucristo para ense de indisponerse con los soberanos fué la causa de no
ñar, no son dueños de reunirse siempre que lo crean haberla publicado despues.
necesario; el gobierno de la Iglesia seria muy defec BULA UNIGENITUS. Véase UNIGENITUS.
tuoso si no pudiera manifestar su creencia de otro mo
do que por medio de la decision de un concilio. ¿Aca Bulgaros. llereges que reunieron diferentes
so puede hablar de otra suerte mejor que por el ór errores de otras heregías para arreglar su creencia,
gano de su gefe, á el cual se repulan linidos todos los y cuya secta y nombre comprendian los patarinos,
obispos, en cuanto á la esencia, desde el momento que los cataros, los bogomilas, los jovinianos, los albi—
no reclaman? Si la decision les pareciera falsa, su genses y otros herege3. Los bulgaros traian su orígen
silencio seria una prevaricacion y un lazo inevitable de los maniqueos, y habian entresacado sus errores
de error para los fieles. V. ConstitucioN. de los orientales y de los griegos, sus vecinos, bajo
el imperio de Basilio el Macedonio, en el siglo IX.
Bula in coema Donnini. Se llama asi una La voz de bulgaros, que no era mas que un nombre
bula que se leia todos los años públicamente en Roma de nacion, llegó á ser con el tiempo el de una secta,
el Jueves Santo por un cardenal diácono, á presen por lo que al principio no significaba otra cosa mas
cia del Papa, acompañado de los demas cardenales y que los hereges de Bulgaria; pero habiéndose esten
de los obispos; no se conoce cuál fué su primer autor.
dido esta heregía en muchos paises, aunque con al
Esta bula contiene la pena de escomunion contra guna diferencia en sus opiniones, se hizó comun el
todos los hereges contumaces y refractarios que des— nombre de bulgaros para todos aquellos que fueron
obedezcan á la Santa Sede. Despues de su lectura el infestados de la misma heregía. Los petrobusianos,
Papa tomaba un cirio encendido y le arrojaba á la discípulos de Pedro de Bruis, que fué quemado en
plaza pública en señal de anatema. Saint-Guillés en la Provenza los valdenses, secla
En la bula de Paulo III del año 1536 se dice al rios de Valdo de Lyon, un resto tambien de los ma
principio que es una costumbre antigua de los sobe— niqueos, que se habian ocultado por mucho tiempo
ranos pontífices el publicar esta escomunion el dia de en Francia, los enriquianos y otros innovadores se
Jueves Santo, para conservar la pureza de la religion mejantes, que á pesar de la diferencia de sus dogmas,
cristiana, y para mantener la union entre los fieles; se ponian todos de acuerdo para combatir la autori
pero no se deja traslucir el origen de esta ceremonia. ¿? de la Iglesia romana, fueron condenados en 1176
Las censuras de la bula in caena Domini atañen en un concilio celebrado en Lombez, cuyas actas se
principalmente á los hereges y sus fautores, á los pi leen por estenso en Rogerio de Hoveden, historiador
ratas y corsarios, á los que falsifican las bulas y las de Inglaterra: refiere los dogmas de estos hereges;
denas cartas apostólicas, á los que maltratan á los entre otros errores decian que no era necesario creer
prelados de la lglesia, á los que alteran ó quieren res mas que en el nuevo Testamento; que el bautismo
tringir la jurisdicion eclesiástica, aunque sea con el no era necesario á los niños pequeños; que los mari
pretesto de impedir algunas violencias, y aunque sean dos que vivian conyugalmente con sus mugeres no
consejeros ó procuradores generales de los príncipes podian salvarse, que los sacerdotes que tenian mala
seculares, como emperadores, reyes ó duques, á los vida no consagraban; que no se debia obedecer á
que usurpan los bienes de la glesia, etc. Estas últi los obispos ni á los eclesiásticos que no vivian segun
mas cláusulas han dado lugará que muchos teólogos los cánones; que no era permitido jurar en ningun
y jurisconsultos sostuvieran que esta bula tendia á caso, y algunos otros artículos no menos erróneos.
establecer indirectamente el poder de los papas sobre No pudiendo estos desgraciados subsistir sin gefe,
lo temporal de , los reyes. Todos los casos de que se forjaron un soberano pontífice á quien llamaron
acabamos de hablar se declaran en ella reservados; de papa, que reconocieron como su primer superior, al
suerte que ningun sacerdote puede absolverlos sino cual estaban sujetos todos los demas ministros; este
en el artículo de la muerte. falso pontífice estableció su silla en la Bulgaria en
El concilio de Tours declaró en 1510 la bula in las fronteras de Hungria, Croacia y Dalmacia, á don
caena Domini no admisible respecto de la Francia; de los albigenses que estaban en Francia iban á con
los reyes de este pais protestaron muchas veces de sultarle y á recibir sus decisiones, Regnier añade que
esta bula por lo que atañe á sus derechos, á los de sus este pontífice tomaba el título de obispo y de hijo pri
empleados y á las libertades de la Iglesia galicana. mogénito de la Iglesia de los bulgaros. Entonces fue
En 1580 algunos obispos, durante el tiempo de las va cuando estos hereges empezaron á comprenderse to
caciones del parlamento, trataron de hacer recibir en dos en general bajo el nombre comun de bulgaros,
sus diócesis la bula in caena Domini. El procurador nombre que no tardó en corromperse en la lengua
 BUL 275 BUL
francesa que se hablaba entonces, porque en lugar de Como estos miserables eran muy dados á la usura,
bulgaros se decia al principio bugaros y bugueros, y en daban despues á los usureros el mismo nombre que
lalin bugari y bugeri; y despues dieron origen á una á ellos, segun lo observa Ducange. Marca, Hist. de
palabra muy fea en la lengua francesa, que se en— Béarn; La Faille, Anales de la ciudad de Tolosa,
cuentra en las historias antiguas aplicada á estos he Compendio de la historia antigua.
reges, entre otras en una historia de Francia manus
crita, que se conserva en la biblioteca del presiden Buriñomistas, nombre de una secta. Se lla
te de Mesmes, del año 1225, y en las ordenanzas de man asi en los Paises Bajos protestantes á los que
S. Luis, en donde se ve que estos hereges eran que siguen la doctrina de Antoñela Bouriñon, célebre
mados vivos cuando se les convencia de sus errores. quietista. V. QUIETISMo.

, ) y aba la ó estos nombres misteriosos, etc. Asi es que de la com

& mejor Cab— binacion de las letras del alfabelo, de los números de
bala, pala la aritmética y de las diferentes maneras de trastor
ºbra hebrea, nar y descomponer una palabra se hizo un arte á que
- -

3-9iº signifi se aplicaron sériamente los entendimientos curiosos

ca tradicion. y crédulos.
Han formado
Sin duda los judios fundan en esto la opinion que
º los judios bajo este nombre una tienen de que la pronunciacion del nombre hebreo de
se evana ciencia, que no es mas que Dios puede obrar milagros; de aqui tambien la su -
un tejido de sueños. No hablare - ersticion de sus doctores para cambiar los puntos de
rmos de ella sino para dará conocer lo as vocales, para que se ignorase la verdadera pro
absurdo de la tal ciencia, y para refu nunciacion de esta palabra, de llamarle inefable, etc.
lar una acusacion falsa dirigida con este Forjaron un pretendido arte para descomponer las
motivo contra los Padres de la Iglesia. palabras de la Sagrada Escritura, de hallar el valor
Veamos, segun la opinion de la mayor numérico de las letras, fundando en esto unos miste—
parte de los sabios, cuál ha sido el origen rios y dogmas que creian sériamente. Sus sephiroths
de la cabbala. no son otra cosa mas que una lista y una genealogia
Los caldeos, que no podian comprender de las inteligencias ó los genios, segun el método
que un solo Dios fuese el autor de todos los de los caldeos.
fenómenos de la naturaleza, del bien y del Como Platon admitia tambien genios odiosos infe
mal que acaece á los hombres, imaginaron una mul riores para gobernar el mundo, y Pitágoras atribuia á
litud de inteligencias, genios ó espíritus, unos bue los números una virtud maravillosa, los primeros fi
nos y otros malos, á los cuales atribuian todo lo que lósofos que tuvieron conocimiento del cristianismo,
sucede en la tierra. Persuadiéronse de que los hom hicieron una amalgama de las ideas caldáicas, judái
bres podian entrar en comercio con ellos, conciliarse cas y platónicas, tratando de acomodar á ellas los
la benevolencia de los espíritus buenos, y con su au dogmas predicados por los apóstoles. De aqui los eo
silio vencer óseparar la influencia de los genios ma nos de los valentinianos, la pretendida ciencia oculta
léficos. Tal ha sido en todos los pueblos el origen del de los gnósticos, la magia que profesaron la mayor
politeismo y del culto rendido á los pretendidos dio parte de los antiguos hereges. Esta pertinacia se
ses inferiores. perpetuó entre los filósofos eclécticos del siglo III y
Para invocar el ausilio de los genios buenos y ga IV, se renovó cuando los árabes trajeron de Europa
nar su afecto, era esencial el saber sus nombres; se la filosofia de Pitágoras y de Platon; aun en el si—
los forjaron, y creian que pronunciándolos tenian la glo XVII emprendieron algunos hacer revivir las lo—
fuerza de evocarlos, hacerles obrar, y ahuyentará cas imaginaciones de los cabalistas judios.
los malos espíritus. De aqui vino la supersticion de De esta suerte se formó, segun la mayor parte de
las palabras eficaces, por cuyo medio creian poder los críticos, la cabbala de los judios. Muchos protes
obrar prodigios, la confianza en los talismanes ó en lantes como Basnage, Mosheim, y Brucker trataron
las medallas sobre las cuales se encontraban grabados de probar que el genio cabalístico, nacido en Egipto
 CAB 1276 CAB
entre los esenios y los terapeutas judios, se introdu El sabio académico prueba que la cabbala no es
jo muy luego en el cristianismo, y que de él se infes muy antigua, aun entre los judíos; en vano se han
taron las diferentes sectas, asi como lambien los mis creido encontrar sus vestigios y una débil tintura de
mos Padres de la Iglesia. De esto proviene, dicen esos ella en el Talnud, compilado en el siglo VI; los
profundos razonadores, el gusto de los Padres por las judíos entonces no cultivaban otra ciencia que la de
interpretaciones alegóricas de la Sagrada Escritura. su religion; de manera, que la cabbala no pudo tener
Tambien tomaron origen las opiniones filosóficas que origen entre ellos hasta el siglo X, poco mas ó me
de siglo en siglo se han mezclado con la teologia cris nos. Con efecto, el rabino Hai Gaon, que murió
tiana. Para llevar esta idea brillante hasta el punto el año 1037 ó 1038, es el primer autor en que se en—
que es posible, restaba que decir á los incrédulos que cuentra enunciada de una manera terminante la cab—
Jesucristo mismo tuvo el gusto cabalístico sirviéndose bala. De lo que debe deducirse, que las primeras
de parábolas para instruir al pueblo, y que el autor semillas de este arle ridículo nos vienen de los filóso
del Apocalipsis nos las enseñó, c. 13, y 18, al invitar fos árabes, y que fueron comunicadas á los judíos en
nos á contar las letras y las cifras del nombre de la la época en que estos vivian bajo la dominacion de
bestia. los sarracenos, y por consiguiente en los siglos VIII,
Un sabio de la academia de las inscripciones, me IX y X. Solo despues de esta época es cuando los
morias 13, en 12. p. 58, habló con mas sensatez de la judíos comenzaron á cultivar las ciencias profanas, y
cabbala judia y de su origen; Mosheim y Brucker de en particular la astrologia y la gramática.
bieran haberse aprovechado de sus reflecsiones. El Por lo tanto, se encuentran desvanecidas por prue
cuadro que trazó de esta vana ciencia es de los mas bas evidentes todas las conjeturas falsas de los crí
enérgicos. «Principios falsos ó inciertos, dice, mác— ticos protestantes y su pomposo sistema relativo á los
»simas supersticiosas, interpretaciones arbitrarias, efectos contagiosos de la filosofia oriental, en la que
»alegorias forzadas, abusos manifiestos de los libros creyeron hallar el origen de todas las opiniones del
» santos, misterios sacados de los acontecimientos de universo, verdaderas ó falsas; sistema fascinador á
»los objetos reales y de los símbolos, virtudes atri primera vista, y sostenido con un gran aparato de
»buidas á los juegos de imaginacion sobre las pala erudicion; pero que en el fondo nada contiene de
»bras, las letras y los números, el empeño en consul esencial.
» tar los astros, el pretendido comercio con los espíri
»tus, cuentos fabulosos, historias ridículas, todo res— Cabeza. Esta palabra en hebreo se toma en mu
»pira en ella impostura y seduccion». Se nos discul chos sentidos figurados y metafóricos asi comoen fran
pan si creemos que los mejores talentos de la anti cés, Significa: 1.º el principio: en el Gén. c. 2, y . 10.,
güedad, los filósofos caldeos y egipcios, Pitágoras y se dice de un rio que se dividia en cuatro cabezas, por
Platon, y principalmente los Padres de la Iglesia par que de él nacian cuatro brazos. 2." La cumbre, la par
ticiparon mas ó menos de este caos de absurdos. te mas elevada de un lugar ó de una cosa. 3." Un
Efectivamente, el docto académico se dedica á dis gefe, el que manda á los demas y la autoridad que
culparlos. Hace ver que la cabbala judia no tiene sino ejerce la capital de un imperio. º El principal apo—
una relacion muy remota é imperfecta con las ideas yo de un edificio. Ps. 118, y.22, etc. La cabeza del
astrológicas de los caldeos, con los números de Pilá— ángulo ó la piedra angular, designa áJesucristo, Mat.
goras, con los abraras ó talismanes de los basilidia c. 21, y. 2, etc., porque EL es el gefe, el funda
nos; que los eonos de Valentin se asemejan todavia mento y el apoyo de su Iglesia. 5." Lo que es mejor.
menos á los sephirotos de la cabbala que á las gene— Earod. c. 30 y. 23; los perfumes de la cabeza son los
raciones divinas de Sanchoniathon. Por nuestra parte perfumes mas esquisitos. 6.º El total de un número
añadiremos que se encuentran los mismos errores y que llamamos tambien la suma. Erod. c. 30; y. 12,
preocupaciones entre los indios, los chinos, y aun ó la repeticion sumaria de muchas cosas que deno
entre los salvages de la América; y sin duda que minamos recapitulacion. 7." Los diferentes cuerpos
estos últimos no habrán ido á buscarlos á Egipto. ó batallones de que se compone un ejército, Judith
Es una obstinacion ridícula el querer encontrar en c.7. y. 16; porque se subdividian en muchas partes.
un solo lugar del universo el origen de las opiniones En un sentido casi parecido á los que nosotros llama
verdaderas ó falsas que se producen naturalmente en mos capitulos, capita las divisiones de un libro que
el ánimo de todos los pueblos. contiene muchos artícnlos ósecciones. 8." En el salmo
Observa muy á propósito que el gusto de los anti 0, y. 8, y Heb. c. 10, y. 7, leemos: In capite libri
guos por los símbolos, los geroglíficos y las alegorias scríptum est de me; caput no significa en este caso un
provino de la necesidad del rumbo de la imaginacion capitulo, sino la totalidad de las Sagradas Escrituras.
de los orientales, y no del designio de ocultar la 9." Caput y cauda significan los primeros y los últi
verdad al vulgo, como han soñado nuestros filósofos mos. Deut. c. 28, y . 13, etc. 10. La cabeza de los
modernos; que no es de admirar que los Padres de la aspides, Job. c. 20, y. 16, es el veneno de las ser
Iglesia, y aun los escritores sagrados, se conforma— pientes.
sen con el gusto dominante; todos los sabios y filóso Esta palabra se encuentra en muchas frases pro
fos se veian obligados á tener en cuenta esto, pues verbiales, cuyo sentido es fácil conocer. Marchar con
que de otra manera no hubieran podido hacerse es— la cabeza baja, es jemir en la tristeza, Jerem. c. 2,
cuchar. ¿Creeremos que los peruanos y otros pueblos y.10; encorvar la cabeza es afectar un aire mortificado;
de la América se sirvieron de geroglíficos á falta de Isaias, c. 58, y.5, dice que el ayuno no consiste en
escritura, á fin de que no fuesen comprendidos por bajar la cabeza y darla vueltas como formando un cir
todo el mundo? culo; era un ademan de los judíos hipócrilas. Levan
 CAB 2777) CAD

tar la cabeza, es adquirir valor, Eccles. c. 20, y. 11, las iniquidades del pueblo; no le mataban por temor
ó ensoberbecerse. Levantar la cabeza de alguno es sa de que no apareciera como inmolado al demonio. No
carle de la humillacion y darle honor, IV Regum, c. 25, es de admirar que las ceremonias de espiacion hayan
y. 27; perfumarle la cabeza es colmarle de bienes, estado en uso en todos los pueblos y religiones; esto
Ps. 22, y.5, rasurarle la cabeza, decalvare caput, es prueba que en todas partes se ha conocido la necesi
cubrirle de ignominia, Isaias, c. 3, y.17, etc., sacu dad de arrepentirse y satisfacer á la justicia divina
dir la cabeza es á veces una señal de desprecio; cuarto cuando se ha pecado; mas en las religiones falsas es
Reg. c. 19; y otras veces de alegria y felicitacion; los tas ceromonias ordinariamente eran supersticiosas, y
padres de Job, despues de su curacion y restableci con frecuencia nuevos crímenes. Entre los judios, por
miento á la fortuna, vinieron á felicitarle, y sacudie el contrario, la ceremonia no solo era inocente en sí
ron la cabeza sobre él, Job. c. 2, y. 11; rasurarse la misma, sino que ademas estaba destinada para sepa
cabeza era señal de luto, Levit c. 10, y. 6; no era rar las de las prácticas abusivas ó criminales de los de
permitido á los sacerdotes sino en el caso de muerte mas pueblos. -

de alguno de sus mas procsimos parientes, c. 21, y. En vano el emperador Juliano, á quien han copia—
5. A veces se cubrian la cabeza en los momentos de do nuestros incrédulos modernos, pretendia que la ce
afliccion. II Reg. c. 19, y . . Era natural el ocultar remonia del cabron emisario era tomada de los paga
la alteracion que una pesadumbre violenta produce en nos; que esta víctima era ofrecida á los dioses espia
las facciones del rostro. Dar de la cabeza en alguna torios, diis averruncis. S. Cirilo contra Juliano, lib. 9,
cosa es obstinarse en ella; los judios, dice Esdras, p. 289. Los judios no conocieron á estos pretendidos
c. 9, y. 17, se pusieron en la cabeza, dederunt caput, dioses sino cuando se entregaron á la idolatria para
el volverá su antigua servidumbre. imitará sus vecinos, Pero despues añadieron á la ce
En el Diccionario de la Academia puede verse que remonia muchas circunstancias que Moisés no habia
este modo de hablar es comun á nuestra lengua, o es ordenado, y que pudieron ser tomadas de los cana
reemplazado por otros semejautes. neos, Prideaux, Hist. de los judios, l, 9, t. 1, p. 35.
Los que han dicho que el cobron emisario era una
Cabron emisario. En el capítulo 16 del Le figura ó tipo de Jesucristo cargado con las iniquida
vítico, vemos lo que tenia que hacer el gran sacer des del mundo, no han andado muy acertados. Por —
dote de los judios en la fiesta de la espiacion, que se contrario, S. Pablo, Hebr. c. 9, y.7, 13 y 25, come
celebraba el décimo dia del séptimo mes, llamado tis para la sangre del cabron inmolado en sacrificio, y
ri, que corresponde á nuestro mes de setiembre. Se con la cual entraba el gran sacerdole en el santuario,
conducian al gran sacerdote dos machos cabrios ó ca á la sangre de Jesucristo que ha sido la única capaz de
brones que sacaba por suerte el uno para el Señor, y borrar los pecados. V. EsPAcioN.
el otro para Azazel; el que cabia en suerte para el Se.
ñor era inmolado, y su sangre servia para la espiacion; Cadaver. Segun la ley de los judios, el que to
el gran sacerdote ponia ambas manos sobre la cabeza caba un cadáver quedaba manchado; tenia que pu
del otro, confesaba sus pecados y los del pueblo, car rificarse antes de presentarse en el tabernáculo del
gaba, digámoslo asi, á este animal con ellos, le condu Señor. Núm. c. 19, y, 11 y sig. Algunos críticos de
cian despues al desierto y era puesto en libertad. Por las leyes de Moisés han creido que este mandato era
esla razon, este se llamaba Azazel cabron emisario, supercticioso; á nosotros nos parece, por el contrario,
ó enviado; asi es como han traducido el término he— que era muy prudente. 1° Era una precaucion contra
breo los Setenta y la vulgata. la supersticion de los paganos que interrogaban á los
Algunos intérpretes creyeron que Azazelera el nom muertos, para saber de ellos el porvenir ó las cosas
bre del demonio, y que asi el cabron emisario se le ocultas, abuso prohibido severamente á los judios,
reputaba como entregado al enemigo de la salvacion. Deut. c. 18, y 11; pero que reinó en la mayor parte
Esta es la opinion que siguió Spencer en su diserta de las naciones. La costumbre que tenian los egipcios
cion sobre el cabron emisario. Tratado de las leyes y de conservar las momias, podia dar lugar á ello y no
ceremonías de los judios, lib. 3. Beausobre se preva— debia imitarse su ejemplo.
lió de esto para decir que se encontraba en los judios 2.° Esta ley tendia á inspirar mas horror al ase
un vestigio de la creencia de los dos principios adop sinato. Cuando se sabe lo comun que era este crímen
lados por los maniqueos. Hist. del maniqueismo l. 5, en los pueblos poco civilizados, no hay razon para
c. 3, S. 6. Azazel, dice, es seguramente el demonio criticará un legislador que toma todas las precaucio
como lo probó Spencer. Mas las pruebas de Spencer nes posibles para evitarlo. En climas tan cálidos co
son nulas, y eslan refutadas en la Hist. unio. hecha mo la Palestina hay peligro en conservar por mucho
por los ingleses, tom. 2, y en las notas sobre la biblia tiempo los cadáveres sin darles sepultura; era muy á
de Chais, Levit, c. 16, y . 8. Beausobre no pudo, pues propósito el obligará los judios a enterrar pronto los
probar su asercion. muertos, y á purificarse despues de haberlos tocado.
Otros creyeron que Azazel era el nombre de un Desde que los mahometanos descuidaron el tomar
monte, de un desierto, ó de un prncipicio hácia el las mismas preocupaciones y observar la misma lim—
cual se conducia el cabron cargado con las iniquida pieza que los judios y los egipcios, el Asia y el Egipto
des del pueblo. Todo esto no son mas que congeturas. fueron el foco de la peste. Si se conocieran mejor las
Spencer cree tambien que el culto rendido á los costumbres antiguas, los peligros relativos á los cli
machos cabrios en Egiptó y otras partes fue una de mas, los errores y desórdenes de los pueblos, de que
las razones que movieron á Moisés para elegir este estaba rodeado Moisés, cesaria la temeridad de criti
animal como objeto de maldicion, y cargarle con carTOM0
ninguna de sus leyes.
l. -
 CAI 278 CA
Cadena. tes del nacimiento de Seth, Adan y Eva tuvieron trm
Catena patrum. V. ComENTARno.
gran número de hijos y nietos de que no habla la Sa
«ararnaum. Ciudad de Galilea, en la cual grada Escritura. En cuanto á lo que dice Josefo, que
vivió Jesucristo algunos años. Mat., c., y . 13. Se Cain se hizo gefe de una multitud de bandidos, es
queja muchas veces de la incredulidad de los habi una congelura que no está fundada en la historia san
tantes de esta ciudad, y los incrédulos modernos han ta, y que no merece la menor atencion. Desde aque
tratado de sacar de esto alguna ventaja para hacer lla época no se cita ya el nombre de Cain en el anti
sospechosos los milagros y virtudes del Salvador; no guo Testamento.
podia, dicen, ser juzgado mejor que por sus conciu Se dice que Dios le imprimió una señal para impe
dadanos. dir que fuese muerto; algunos autores se persuadie
Nosotros creemos todo lo contrario. Cuando se co— ron que Dios habia cambiado el color del rostro de
nocen por esperiencia las prevenciones; la envidia y Cain haciéndole negro, de donde provino la raza de
la malignidad anejas á los habitantes de los pueblos los negros. Esto es una quimera; estos escritores no
pequeños, se palpa la verdad de la máxima que Je recordaron que en la época del diluvio universal
sucristo pronunció con este motivo, de que nadie es toda la raza humana se formó de la posteridad de
profeta en su patria. Mat, c. 13, y: 57. Imbuidos Noé. Esto ha servido á un incrédulo de nuestros dias
cs galileos en la preocupacion general de la nacion ara declamar contra los comentadores de los li
judia, que el Mesías debia ser un conquistador, ¿po— ros sanlos; ¿mas es preciso atribuir á los comenta
dian persuadirse con facilidad de que el hijo de un dores en general la equivocacion de uno ó dos par
artesano, cuya familia toda era conocida, fuese el ticulares? Algunos intérpretes traducen asi el testo
Hijo de Dios bajado del cielo y encarnado para la sal hebreo: Dios hizo ana señal ó un milagro delante de
vacion de los hombres? Tres años de instruccion, de Cain para asegurarle que no seria muerto. Otros:
milagros y virtudes no eran muchos para persuadir Dios dispuso el porvenir para Cain de manera que
á hombres, muy groseros una verdad tan sorpren no fuese muerto por cualquiera que le encontrara. Un
dente, y á la cual han opuesto larla repugnancia los escritor que entiende muy bien el hebreo ha dado re
incrédulos de todos los siglos. No debe sorprendernos cientemente respuestas sólidas á otras objeciones que
si los cafarnaitas se sublevaron cuando Jesucristo les pueden hacerse contra la historia de Cain. Respuesta
prometió darlos á comer su carne y beber su sangre. crítica, etc., t. ... p. 1.
Joan., c. 6, y.52. En el dia se encuentran sectas de
cristianos que no quieren creer nada de esto. Pero Cain itas, hereges del siglo II, que honraban
por último, Jesucristo consiguió persuadir á sus con— estraordinariamente á Cain y á los demas personages
ciudadanos, pues que la mayor parte de ses discípu que la Escritura nos pinta como los mas malvados de
los eran al y muchos de sus parientes su— los hombres, tales como los sodomitas, Esau, Coré,
frieron la muerte por él despues de su resurreccion. Judas, etc. Era una rama de los gnósticos que unia
V. PA RIENTEs. á las costumbres mas corrompidas los errores mas
m0nSl TuOSOS
Calanistas. V MoNOFisiTA s. Como admitian un principio superior al Criador,
mas sabio y mas poderoso que él, decian que Cain
Calda de A dan. V. ADAN. era hijo del primero, y Abel una produccion del se
gundo. Sostenian que Judas estaba dotado de un co
- Cain. Hijo de Adan, y asesino de su hermano nocimiento y de una sabiduria superior, que no ha
Abel. La indulgencia con que Dios trató á este des— bia entregado á Jesucristo á los judios sino porque
graciado despues de su crimen es digna de atencion; preveia el bien que debia resultar para los hombres;
la han hecho notar muchos Padres de la Iglesia. Des. por todo lo cual le rendian acciones de gracias y ho
pedazado por los remordimientos, y temblando por nores, y tenian un Evangelio bajo su nombre, lo que
su propia vida, Cain se veia próximo á la desespe hizo que los llamasen tambien Judaitas.
racion: Dios se dignó tranqnilizarle, y se contentó con No admitian la antigua ley ni el dogma de la re
hacerle espiar su crimen por medio de una vida er— surreccion futura, exhortaban á los hombres á des
rante. Este rasgo de misericordia, y otra infinidad truir las obras del Criador y á cometer toda clase de
que refieren los libros santos, eran, sin duda alguna, crímenes: decian que las malas acciones conducian á
necesarios para dar á los pecadores esperanzas de la salvacion. Suponian ángeles que presidian al pe
perdon, é impedir que se hicieran mas temibles con cado, y ayudaban á cometerle, le invocaban y le
el furor de la desesperacion. rendian culto. Por último, hacian consistir la perfec
Con muy poca razon un incrédulo moderno se ha cion en despojarse de todo sentimiento de pudor y en
escandalizado de la indulgencia con que Dios trató al cometer sin vergüenza las acciones mas infames. Ter
fratricida. Este crírmen no quedó impune, pues que tuliano nos dice que enseñaban tambien errores so
el culpable fue condenado á llevar una vida errante bre el bautismo.
sobre la tierra. La mayor parte de sus opiniones estaban conteni
Pregunta cómo Cain podia decir entonces: El que das en un libro quo titulaban la Ascension de S. Pa
me encuentre me matará. Gén. c., y. 14. Esta es blo, en el que, bajo pretesto de las revelaciones he
la espresion del terror. Se duda si Adan tenia ya un chas á este apostol en su arrobamiento al cielo, en—
gran número de hijos, y si Abel mismo los dejó; Cain señaban sus impiedades y blasfemias,
¿ podia temer la venganza de sus sobrinos; ó mas Una muger de esta secta, llamada Quintilla, fue
ien, es evidente que el año 130 del mundo, poco an al Africa en tiempo de Tertuliano, en donde pervirtió
 CA 279 - CAL
ámuchas personas: se denominaron quintilianistas á Dioscoro, escoltado por los mismos oficiales y apoya
los sectarios que hizo: parece que á las infamias de do por los soldados, hizo maltratar cruelmente á
los cainitas añadia ¿ prácticas horribles. S. Flaviano y á los obispos opuestos á Eutyques. No
Apenas podria creerse que una secta entera hu hay, pues, la menor semejanza entre estos dos con
biera llevado la demencia y depravacion á tal estre cilios.
mo, si este hecho no estuviera atestiguado por los Sabedor S. Leon de todos estos escesos empeñó al
Padres de la Iglesia mas respetables; pero S. Ireneo, emperador Marciano, sucesor de Teodosio, para que
Tertuliano, S. Epifanio, Teodoreto y S. Agustin ha convocara un concilio en Calcedonia con el objeto de
blan de ellos del mismo modo; y los dos primeros establecer la doctrina católica y procurar la paz á la
hasta eran testigos contemporáneos. Los estravios de Iglesia. Este concilio, presidido por los legados del
los fanáticos que hubo en los siglos últimos hacen papa, se compuso, segun algunos autores, de seis—
- creible todo lo que se atribuye á los antiguos. Hórne cientos treinta obispos. Se ecsaminaron en él las ac.—
bec, Controv., p. 390, habla de un anabaptista que tas del concilio de Constantinopla, en el que Eutyques
opinaba de Judas lo mismo que los cainitas. Cuando fue condenado, y las del falso concilio de Efesó; la
entendimiento es arrastrado por la depravacion del profesion de fé de Eutyques, la carta de S. Cirilo
corazon, no hay error ni impiedad de que el hombre contra Nestorio y la de S. Leon á Flaviano. Al leer
no sea capaz. esta esclamaron los cbispos: que tal era la fé de la
Iglesia y de los apóstoles; que Pedro habia hablado
Caja, V. RELIQUIAs. por la boca de León. Por consiguiente la decision del
concilio fue que «Jesucristo, Nuestro Señor, era ver—
Calcedonia (concillo de). Es el cuarto de » daderamente Dios y verdaderamente hombre, com—
los concilios generales; se celebró el año 51 contra » puesto de un alina racional y de un cuerpo, con—
los errores de Eutyques. Este herege, para no caer en »substancial al Padre segun la divinidad, y consubs
el error de Nestorio, que admitia dos personas en Je— » tancial á nosotros segun la humanidad; señor en
sucristo, sostuvo que no tenia mas que una sola na— » dos naturalezas, sin confusion, sin cambio, sin di
turaleza, que por la union hipostática la naturaleza »vision, sin separacion y sin que la union quite las
humana de Jesucristo habia sido absorvida por lana »propiedades y la diferencia de las dos naturalezas;
turaleza divina; de lo que se deducia que la natura » de manera que no hay en él dos personas, sino una
leza divina era la que habia sufrido la pasion de »sola; que es uno solo é Hijo único de Dios, &c».
Imuerte. Asi fueron condenados á la vez Nestorio, Euty ques
Esla doctrina fue condenadaal principio en un cony sus partidarios; Dioscoro fue depuesto, anatemati
cilio de Constantinopla, celebrado en 8, por San zado y desterrado, tanto por las violencias que habia
Flaviano, patriarca de esla ciudad. Eutyques se quejó ejercido en Efeso, como por otros crimenss y sus
al papa S. Leon; Flaviano, por su parte, dió cuenta errores. Mas esta decision no restableció la paz. La
á este pontífice de los motivos de la condenacion; mayor parte de los obispos de Egipto permanecieron
S. Leon la aprobó y escribió áFlaviano una carta adictos á Eutyques y á Dioscoro; su patriarca; pu
que se hizo célebre por la claridad con que este santo blicaron que el concilio de Calcedonia, al condenar a
pa espone en ella la doctrina católica relativa á la Eutyques, habia condenado tambien la doctrina de
y.

ncarnacion. En el intérvalo el emperador Teodosio S. Cirilo y aprobado la de Nestorio, dos falsedades

hizo reunir en Efeso un concilio, en 9, el que pre evidentes. Consiguieron formar un cisma y una secla,
sidio Dioscoro, patriarca de Alejandria, hombre vio cuyos partidarios fueron llamados monofisitas y des
lento, orgulloso, de un carácter intratable y enemi pues jacobitas. V. EUTyQUIANos.
go de S Flaviano. Se adhirió fuertemente á la doc No tienen razon Mosheim y otros protestante para
rina de Euty ques, anatematizó á S. Flaviano y San llamar al concilio de Calcedonia una asamblea ruidosa
Leon, obligó á los obispos á firmar esta decision, em y tumultuosa, y quieren persuadirnos de que todo
pleó los ¿ y los ultrages contra S. Flaviano y fue un desorden, poco mas ó menos, igual al del falso
contra los obispos que le eran adictos, y le envió á un concilio de Efeso. El emperador mismo estuvo pre
destierro, en el que murió á consecuencia de los ma— sente á muchas sesiones, y nada se hizo sino des
los tratamientos que habia esperimentado. Por esta pues de un maduro ecsamen; era preciso toda la per
razon se ha llamado á esta reunion tumultuosa los tinacia que inspira la heregía, para prevenirse con
salteadores de Efeso. tra la manera con que alli se procedió. El traductor
de Mosheim dice que S. Leon, en su carta á Flavia
Este concilio no fue ecuménico, diga lo que quiera
Mosheim; la carla convocatoria decia: que el exarca no, esplica con gran apariencia de claridad la creen
ó patriarca tomaria consigo diez metropolitanos de cia católica sobre este embrollado asunto; la claridad
su dependencia y otros diez obispos para reunire en de esta carta no es aparente, sino muy real, y, fue
Efeso; la asamblea se compuso á lo mas de ciento juzgada como tal, no solo en Oriente, sino en todo
treinta y cinco obispos, y los legados del papa pro el Occidente; por su propia confesion esla carta pasó
testaron contra todo lo que en ella pasó. Tampoco es por una obra maestra de lógica y, de elocuencia, y
cierto que el concilio anterior, celebrado en la mis se leia todos los años durante el Adviento en las igle
ma ciudad el año 431 contra Nestorio, se deshonrara sias de Occidente. Los mismos protestantes se ven
por la misma injusticia y violencia que este. S. Cirilo, obligados á espresarse como S. Leon en sus disputas
que presidia el primero, no echó mano de ninguna contra los socinianos con respecto al misterio de la
violencia contra Nestorio, que era protegido y guar Encarnacion. -

dado por los oficiales del emperador; en el segundo, Despues de haber fijado el dogma católico, el con
 CAL . 280 CAL
cilio de Calcedonia hizo tambien muchos cánones de ro esto no debe entenderse mas que de los últimos
disciplina: el veinte y ocho, que atribuia á la silla de siglos de la historia judía. En tiempo de Abraham,
Consiantinopla los mismos privilegios y prerogativas el lenguaje de la Mesopotamia, el de la Siria, y el
ue á la de Roma, causó vivas disputas: los legados de los cañaneos de la Palestina eran tan semejantes,
e S. Leon reclamaron contra este reglamento, , y que estos pueblos podian entenderse sin intérprete.
sosluvieron que era contrario al cánon sesto del Por esto ¿
Filen que los libros santos habian sido
concilio de Nicea, que dice que la Iglesia romana escritos en caldeo; es decir, en la lengua que habla
tuvo siempre la primacía. S. Leon mismo se quejó ba Ahraham cuando salió de la Caldea. Pero este
de esto, y no quiso confirmarlo. Mas los griegos per lenguaje cambió despues en estos tres paises: en
manecieron adictos, y este fue el primer germen del tiempo de Jesucristo, el siriaco de Antioquia no era
cisma que formaron con la iglesia latina en los siglos ya el mismo idioma que el caldeo de Babilonia: se
siguientes. escribia en caractéres diferentes de las letras babi
lónicas. La lengua de Jerusalen estaba mezclada con
Caldaico. Que pertenece á los caldeos. Habla la hebrea, la caldea y la siriaca: por esto se llamo
remos de las paráfrasis caldaicas bajo este mismo syro caldea y syro-hebrea. La version siriaca de la
nombre y de la lengua caldaica en el artículo si Sagrada Escritura no es lo mismo que las paráfrasis
guiente. caldeas. Vease BibliAs SIRIACAs.
Ciertos críticos mal instruidos trataron de persua—
Caldeos. Pueblo que en su origen habitaba la dir que el cambio de las letras hebreas ó samaritanas
Mesopotamia, pais situado entre el Tigris y el Eu en caractéres caldeos pudo causar alguna alteracion
frates, y del que se habla mucho en la Escritura. en el testo de los libros santos; es como si se dijera
No nos toca á nosotros discutir acerca de las antigüe que cuando abandonamos las letras góticas para adop
dades fabulosas de los caldeos, que tantas veces han lar nuestros caractéres modernos, cambiamos el tes—
opuesto los incrédulos á la historia santa: en el dia to de nuestros libros.
nadie cree en ellas; y está demostrado que sus ob— Segun la tradicion de los orientales, muchos de los
servaciones astronómicas no se remontaban mas que apóstoles, y particularmente Santo Tomás, S. Adeo ó
hasta el siglo del diluvio. Asi, cuanto mas se estudian Tadeo y otros discípulos del Salvador, predicaron el
los monumentos de la historia, tanto mas se conoce Evangelio, no solo á los caldeos en la Mesopotamia,
la verdad de lo que la Escritura nos dice acerca de es— sino tambien á los persas y otros pueblos mas aparta
tos pueblos antiguos. dos hácia el Oriente. Véase ORIENTALEs. Hubo en la
Nos dice que los caldeos fueron los primeros que Caldea dos ciudades principales episcopales, Edesa y
cayeron en el polileismo, y que la idolatria mas an Nisibe, en cada una de las cuales ecsistieron escuelas
tigua fue el culto de los astros. Véase AsrRos. Ahora célebres que produjeron sabios. Algunos doctores que
bien, los caldeos fueron los primeros observadores salieron tanto de una como de otra escuela, fueron los
del cielo. Convidábales á entregarse á la astronomía que, seducidos por los escritos de Diodoro de Tarso,
la belleza de las noches con que su clima les favo de Teodoro Mopsuesteno y de Nestorio, estendieron
Tecía. los errores de este últi no por la Caldea, la Asiria y la
Su historia se encuentra unida esencialmente á la Persia, y los llevaron hasta las Indias, la Tartaria y
de los judios. Abraham partió de la Caldea para ir á la China. En los tiempos posteriores, estos sectarios
habitar la Palestina. Isaac y Jacob se casaron con se avergonzaron del nombre de nestorianos, y siem
caldeas. En tiempo de Abraham, los reyezuelos de la pre querian que se les denominara Caldeos y orienta
Mesopotamia hacian ya incursiones á la Palestina; y les. Véase NEs tortuANos, PERSIA., etc. Assémani, Bi
en el libro de Job, c. 1, y. 17. se habla de los caldeos bliot. orient. tom. ...º Disertacion sobre los nestoria
como de un pueblo dado al vandalismo. nos ó caldeos.
Los reyes de Asiria, despues de haber somelido
la Caldea, no abandonaron nunca el proyecto de Calendario republicano. A la costum
sujetar á los israelitas, y Dios presenta á estos bre seguida en todos los pueblos de Europa sustituyó
aquel pueblo enemigo como un azote de que echa— por decreto del 5 de octubre de 1793 esta concepcion
ra mano para castigar sus infidelidades; esta ame— estraña y miserable, y la nueva era que comenzó en
naza se cumplió cuando la cautividad de Babilonia. 22 de setiembre de 1792 reemplazó á la que habian
Los judios trasplantados á la caldea por Nabucodo— adoplado todos los cristianos. Los dias, los meses y
nosor aprendieron el caldeo, le mezclaron con el los años cambiaron de nombre. La division del mes en
hebreo, y corrompieron de esta manera su lengua. tres décadas de diez dias cada una, cousagrando el úl
El hebreo puro, tal como se encuentra en los li timo al descanso, hizo que desapareciera el domingo.
bros de Moisés, dejó de ser la lengua vulgar del Mas ridículo todavía que pertinaz en su mania anti
pueblo: fue preciso esplicarle estos libros en caldeo cristiana el gobierno no podia sufrir que el pueblo
en las sinagogas. Esto es lo que dió lugar á los tar— festejase los domingos y las solemnidades de la Igle
gumenes ó paráfrasis caldaicas; los judíos adopta— sia, y abandonara los decadis. En vano trató de atraer
ron tambien los caracteres caldeos que son mas sen al pueblo por medio de los espectáculos, Véase. FIEs—
cillos y comodos que las letras hebraicas samari TA DE LA RAzoN, FIEsTA DEL SER SUPREMo y de las
lanas.
novedades. Se instituyeron, por ejemplo, los Sans-Cu.
Se ha dicho muchas veces que el caldeo se dividió lótidas. Estos eran los cinco dias que terminaban el
en tres dialectos, el de Babilonia, el de Antioquia nuevo año. El uno estaba ¿? áfestejar la opi;
y Comagenes, y el de Jerusalen y de la Judea; pe nion, otro á celebrar no sabemos qué otra divinidad
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dad, etc. Estas fiestas absurdas eran dignas de los que á la perfeccion de la virtud, cuyo camino nos enseña
habian tratado de erigir el Sans-Culotismo en virtud. la revelacion. Segun el dogma católico, por el contra
rio, el hombre no puede hacer de ninguna facultad
Calixtinos. Sectarios que aparecieron en Bo— natural un uso útil para la salvacion, sino por medio
hemia á principios del siglo XV. Se les dió este nombre del ausilio de una gracia, que nos previene y obra en
porque defendian la necesidad del calizó de la comu nosotros y con nosotros. Es una máxima universal—
nion bajo las dos especies, para participar de la Sa mente reconocida que el simple deseo de la gracia es
grada Eucaristía. ya un principio de gracia. Se dice que las obras que
Inmediatamente despues del suplicio de Juan Hus, dejó son muy medianas, apesar de los elogios pom
dice Mr. Bossuet, se vieron aparecer dos sectas en posos que le han prodigado los protestantes. Por lo de
Bohetnia bajo su nombre; los caliactinos, á cuva cabeza mas, era mas moderado que la mayor parte de sus
estaba Roquesana, y los taboritas tenian á Ziska. La cohermanos; habia formado el proyecto ; sino de
doctrina de los primeros consistia al principio en cua reunir á los católicos, luteranos y calvinistas, por lo
tro artículos. El primero era concerniente á la copa, ó menos inclinarlos á tratarse mútuamente con mas dul
á la comunion bajo la especie del vino; los otros tres zura, y á tolerarse unos á otros. Este designio le atra
atanian á la concesion de los pecados públicos y par— jo el odio de un gran número de teólogos de su secta;
ticulares, sobre la cual llevaban la severidad hasta el escribieron contra él con el mayor calor, y le re
esceso; á la predicacion libre de la palabra de Dios, rocharon muchos errores. Le miraron como á un
que no querian que se prohibiera á ninguno; y á los ¿ hermano, que por anor á la paz hizo traicion á
bienes de la Iglesia contra los cuales declamaban. la verdad. Mosheim, muy deseoso de justificarle, no
Estos cuatro artículos fueron arreglados en el conci— se ha atrevido á hacerlo, ni á aprobar el proyecto que
lio de Basilea de una manera tal, que los calixtinos Calisto habia formado. Hist. ecles del siglo XVII, sec
quedaron al parecer contentos; les fue concedida la cion 2." part. 2." c. 1, S.23. Para dar gusto á los
copa bajo ciertas condiciones en que convinieron. protestantes, es necesario declamar contra la Iglesia
Este acuerdo se llamó compactun, nombre célebre romana, y manifestar hácia ella la mayor aversion.
en la historia de Bohemia. Pero una parte de los hu Véase SINCRETIsTAs.
sitas no quiso entrar en ella y comenzaron bajo el nom
bre de taboritas las guerras sangrientas que devasta Caliz. Coca, vaso para beber; este término es
ron la Bohemia. Otra parte de husilas, denominada de empleado muchas veces por los escritores sagrados en
los caliactinos, que habia aceptado la concordia, no se un sentido metafórico, fundado en las costumbres
aluvo á ella; en lugar de declarar, segun se habia con autiguas. Como se ponian en una copa las bolas pe
venido en Basilea, que no es necesaria la copa, , ni queñas, las habas o las cédulas que servian para
mandada por Jesucristo, establecieron la necesidad sacar una suerte, caliz significa con frecuencia la
aun respecto de los niños recien bautizados. Prescin suerte, la porcion de heredad que toca á alguno por
diendo de este punto convenian en un todo con el dog suerte. Ps. 10, y 7; el fuego, el azufre, los vientos
ma de la Iglesia romana, y hubieran reconocido la borrascosos, serán la porcion del caliz de los impíos.
autoridad del papa, si Roquesana, incomodado por En Ps. 15, y 5, se dice: «El Señor es la porcion de
no haber obtenido el arzobispado de Praga, no los hu mi heredad y de mi caliz, es decir, la porcion de he
biera sostenido en el cisma. redad que me cayó por suerte.»
Despues, parte de ellos, juzgando que tenian mucha Por una metáfora semejante, los escritores hebreos
semejanza con la Iglesia romana, trataron de llevar empleaban para designar lo heredado, la posesion
mas adelante la reforma, y al separarse de los calia de un hombre, el cordel ó la pértica con que se
tinos formaron una nueva secta, que se denominó los media la porcion de cada uno de los herederos. En
hermanos de Bohemia. Hist. de las variac., lib. 11, el Ps. 10%, y . 1 , el cordel de vuestra herencia: en
número 168 y sig. el 73, y.2, la cara ó la pértica de vuestra herencia,
Los caliactinos que subsistieron hasta la épo significan vuestra porcion, lo que poseeis. .
ca de Lutero, al cual se reunieron la mayor parte; En otro sentido caliz significa un brevaje, una
y aunque esta secta nunca fue muy numerosa, se dice pocion buena ó mala: los beneficios de Dios son com
que se encuentran todavia algunos esparcidos en Po— parados á una pocion dulce y agradable, sus castigos
lonia. Mosheim piensa que los taboritas, menos furio á un brevaje amargo, que es preciso tragar. En el
sos que al principio, se reunieron tambien á Lutero Ps. 7, y, 9, se dice: que el Señor tiene en su mano
y á los demas reformadores, miembros muy dignos un caliz de vino, mezclado de amargura, que vierte
sin duda de formar una nueva Iglesia de Jesucristo. tanto de un lado como de otro, que los pecadores
CALlXTINOS. Es tambien el nombre que se dá á beberán hasta las heces. Jeremías, c. 25, y. 15,
algunos luteranos moderados que seguian las opinio— dice: el caliz del vino de la ira del Señor, etc. -

nes de Jorge Caliactino ó Calisto, teólogo célebre de Jesucristo preguntó á dos de sus apóstoles: podeis
los suyos, que murió á mediados del siglo XVII. Com beber el caliz que yo he de beber? Matth., c. 20,
batian la opinion de S. Agustin sobre la predestina y. 22, podeis soportar los sufrimientos que me están
cion, la gracia y el libre albedrío; se considera á sus reservados? -

discípulos como semipelagianos. Estaba en uso en otro tiempo, y subsiste todavia

Calisto sostenia que hay en los hombres un cierto entre la gente del campo el echar vino á los convida
grado de conocimiento natural y de buena voluntad, dos á la redonda al fin de las comidas de ceremonia,
y que cuando usan bien de estas facultades, no deja beber á la salud de unos y otros, dar gracias al hués
Dios de darles todos los medios necesarios para llegar ped, que por su parte contesta cortesmente; levan
 CAL. 282 CAL
tarse despues de la mesa, y dar gracias á Dios. En destinados á contener la Eucaristía, el cuidado de
tre los antiguos se bebia á la redonda en la misma guardarlos, é impedir que sirvieran para usos profa
copa, en señal de fraternidad. Por consiguiente, esta nos, es una confirmación bastante clara de la creen
copa se llamaba la copa de bendicion . ó de felices cia general, relativa á la presencia real de Jesucristo
deseos, la copa de acciones de gracias, la copa de sa en la Eucaristía. Si se huhiera considerado este Sa
ciedad, calir inebrians, la copa de salud, porque se cramento de la misma manera que los calvinistas, se
tomaba tambien para facilitar la digestion. Tomar la diria la misa, como ellos hacen la cena, con va
copa de salud, calicem salutaris, é invocar el nombre sos comunes, sin unirá ella idea alguna de san
del Señor, Ps, 115, y . 13, era dar gracias á Dios tidad ni de respeto; pero jamas se ha observado
por sus beneficios. Entre las personas ricas esta copa esta conducta en ninguna comunion cristiana. De
era de oro, y á veces guarnecida de pedrería, como muestra que en todos tiempos los orientales tuvieron
señal de opulencia. El Salmista esclama: cuán her— mucho respeto á los cálices y demas vasos sagrados;
mosa es mi copa de saciedad! «Caliar meus inebrians que los hicieron de oro y de plata, segun pudieron;
quam praeclarus est.» Ps. 22, y.5; cuán feliz es mi que tenian bendiciones y oraciones propias para su
suerte! consagracion. Liturg. orient. Collet., t. 1, p. 102.
En las comidas, destinadas para cimentar una Esta disciplina no es, pues, una nueva institucion
alianza, ó al fin de un sacrificio, no se dejaba de hecha por la Iglesia romana, como los protestantes
beber la copa de accion de gracias y de bendiciones; han dicho.
entonces era la copa de alianza y de amistad; en las
que se celebraban despues de unos funerales, era la Caloyero ó calogero. Caloyeri, monge, re
copa de consuelo. Jerem. c. 16, y . 7. ligiosos y religiosas griegas, que siguen la regla de
Jesucristo, despues de su última cena, se dignó S. Benito. Los caloyeros habitan particularmente el
hacer alusion á estos diversos usos: «tomó un caliz monte Athos; pero sirven casi todas las iglesias de
»lleno de vino, le bendijo, dió gracias á Dios, é Oriente. Hacen votos como los monges en Occidente.
» hizo beber de él á todos sus apóstoles, y les dijo: Jamás se ha hecho una reforma entre ellos: guardan
» este es el caliz de mi sangre y de una nueva alianza; esactamente su primer instituto, y conservan su anti
» haced esto en memoria de mí.» Matth. c. 26, y. 28. guo hábito. Observa Tabernier que llevan un género
Luc., c. 22, y . 20. Asi, segun la intencion del Sal de vida muy austero y retirado; no comen carne, y
vador, esta accion es un símbolo de reconocimiento ademas tienen cuatro cuaresmas, y ebservan otros
hácia Dios y de accion de gracias, de alianza con muchos ayunos de la Iglesia griega con una estrema
Jesucristo, de participacion de su sacrificio, de fra— regularidad. No comen pan sino despues de haberlo
ternidad entre los hombres, y de salud para nuestras ganado con el trabajo de sus manos; los hay que no
almas; la Eucaristía no llenaria perfectamente todas comen mas que una vez en tres dias, y otros dos
estas significaciones, sino fuera mas que la ceremo veces á la semana. Durante sus siete semanas de
nia practicada por los antiguos; todavia produciria cuaresma, pasan la mayor parte de la noche llorando
menos los efectos para que la instituyó Jesucristo. y gimiendo por sus pecados y los de los demas. . .
CALIZ. Se dice particularmente de la copa ó del Algunos autores observan que se dá con especiali
vaso en que se consagra el vino de la Eucaristía. El dad este nombre á los religiosos que son venerables
venerable Beda cree que el caliz de que se sirvió Je por su edad, su retiro y la austeridad de su vida,
sucristo en la última cena era una copa de dos asas, y v le derivan del griego GERAs hermosa y KALos re
contenia una media azumbre; que los que usaron en jez. Hay que nolar, que aunque en Francia se com
los primeros siglos tenian la misma forma. Muchos prendan todos los monges bajo el nombre de ca
eran de madera ó de vidrio; el papa Zeferino, ó, se— loyeros, no sucede lo mismo en Grecia; solo los
gun otros, Urbano I, mandó que fueran de oro ó de hermanos se llaman asi, porquo los que son sacer
plata; Lecn IV prohibió el emplear cálices de estaño dotes se denominan leronomacos yERoNOMAkoy, sacri
o de vidrio; el concilio de Galchut ó Celeylh, en In ficadores.
glaterra, renobó la misma prohibicion el año 787. Los turcos dan tambien á veces el nombre de calo
Los cálices de las antiguas iglesias pesaban, por lo yeros á sus dervisó religiosos,
menos, tres marcos; en los tesoros y sacristías de Las religiosas caloyeras estan encerradas en mo
muchas iglesias se hallan tambien de un peso mas nasterios, en donde viven separadamente cada una
considerable. Los hay que no parece posible que los en su casa. Llevan todas un hábito de lana negra y
pudieran usar, á causa de su volumen, y que son un manto del mismo color; tienen la cabeza rasura
probablemente donativos hechos por los príncipes da, los brazos y las manos cubiertas hasta la estre
para servir de adorno. Hornio, Lindan y Beato Rhetano midad de los dedos; cada una tiene su celda, y estan
dicen que vieron en Alemania antiguos cálices, á los sujetas todas á una superiora ó abadesa. No obstante;
que se ajustaba con mucho arte un tubo, que no observan una clausura muy regular, porque si
servia á los seglares para recibir la Eucaristía bajo bien está prohibida la entrada á los sacerdotes grie
la especie del vino. Véase el antiguo Sacramento de gos, no asi para los turcos que van á comprar labo
la Iglesia, por Grandcolas, p. 92 y 728; Bona de res de aguja hechas por estas religiosas. Las que no
Rebus liturgicis, l. 1.º, c. 25. viven en comunidad, son por lo general viudas, que
El abate Renaudot, en su Coleccion de las liturgias no hacen mas voto que el de ponerse un velo negro
orientales; observa con razon que la antigua costum en la cabeza, y decir que no quieren casarse. Unas
bre de la Iglesia, de consagrar por medió de las ora y otras van á dónde les place, y gozan de bastante
ciones y de las unciones, los cálices y demas vasos libertad á favor del hábito religioso.
 CAL 283) CAI.
Calumnla. Falsa imputacion que se hace á al los restos del primer pecador. Orígenes, S.Cipriano,
guno de un vicio, de una mala accion ó de una mala San Basilio, S. Epifanio, S. Atanasio, S. Juan Crisós
intencion de que no es culpable en realidad. Ademas tomo, S. Ambrosio y otros, citan esta tradicion; San
del pecado de mentira, que es la base de este crimen, Gerónimo, despues de haberla desechado, parece que
es una injusticia que hiere al prójimo en lo que le es volvió á adoptarla. Epis. ad Marcellam. Que sea ver
mas caro, en su reputacion, y con frecuencia perjudi dadera ó falsa, poco importa; siempre prueba la opi
ca á su fortuna. Las calumnias formadas por escrito y nion que se tenia en aquei tiempo de su eficacia y
publicadas por la imprenta son todavia mas odio universalidad de la redencion.
sas que las que se limitan á discursos; los libelos dis— CALVARIO. Entre los cristianos es una capilla de
famatorios contra los vivos y los muertos, merecen devocion en la que hay un crucifijo, y está edificada
penas alictivas, y jamás se castigan con demasiada sobre un olero cerca de un pueblo, á imitacion del
severidad. Calrario en que fue crucificado Jesucristo en la proc
«El que, dice el Eclesiastés, calumnia en secreto, simidad de Jerusalen. Tal era el Calvario del Monte
»es una serpiente que muerde en silencio». Eccles., Valeriano de junto á Paris; en cada una de las siete
capítulo 10, 3.11; «es un hombre abominable con capillas de que se compone está representado alguno
el cual es preciso no asociarse». Prov., c. 2, y.9, de los misterios de la pasion.
y 21. «No calumniareis á vuestro prójimo, no le vio
y lentareis». Levit, c. 19, y . 19. Es una ley del an X& Calvario (congregacion de nuestra
tiguo Testamento fundada sobre las nociones natura Señora del). Derecho eclesiástico. Es una Orden
les de la justicia. de religiosos que siguen en todo su rigor la regla de
«No os acuseis los unos á los otros; el que juzga ó San Benito. La fundó Antoñila de Orleans, de la casa
»infama á su hermano no respeta la ley». Jac., c. , de Longueville. A los veinte y dos años esta señora
y. 11. «Renunciad á la malignidad, á la impostura, quedó viuda de Cárlos de Gondi, marqués de Belle -
»á la maledicencia; no volvais mal por mal, ni ca isle, retirándose al monasterio de monjas Fuldenses
lumnia por calumnia». 1.” Pet., c. 2, y. 1; c. 3, y. 9. de Tolosa, en donde profesó en 1601. Fue nombrada
«Rogad á Dios por los que os persiguen y calum para la reforma de la Orden de Fontevrault, y fijó su
nian». Mat, c. 5, y . 's, tales son los preceptos del residencia en el monasterio de la Claustra, á dos
Evangelio. leguas de Poitiers, dándosela facultades para reci
Una acusacion falsa es muy facil de formar, pero hir las jóvenes que quisieran abrazar una vida mas
muy difícil de reparar: apesar de la multitud de ca estrecha. El P. José, confesor y agente del cardenal
lumnias de que se queja todo el mundo, no se ven de Richelieu, consiguió un breve de Roma el de
ejemplos de reparaciones. S. Pablo acusa de este cri octubre de 1617 con el permiso de la abadesa de
men á los antiguos filósofos. Rom., c. 1, y. 29 y 30. Fontevrault, en el cual se concedia á la madre Anto
Seria de desear que los modernos tuvieran mas cui ñita salir de "¿ Orden, y tomar posesion de un
dado para preservarse de él; pero lo mas general es convento que habia edificado en la ciudad el obispo
que aquellos que declaman con mas amargura contra de Poitiers, llevando en su compañia las religiosas
la calumnia son los que con mas facilidad incurren en que quisieran seguirla. La abadesa de Fontevrault in
ella. Bayle en su caria á los refugiados reprocha á los terpuso apelacion del breve del Papa. Sabedor de
calvinistas de haber introducido en Francia los libe estas cosas el rey encargó al cardenal de Sourdis
los disfamatorios; su Diccionario crítico apenas se que le diese cuenta de ellas. La abadesa desistió
compone de otra cosa; pero no hay una de sus calum de sus pretensiones, permitiendo que hiciesen sus
nias que no haya sido repetida y amplificada por los religiosas una nueva profesion. La madre Antoñita
incrédulos del dia. no llegó á ver el fin de sus deseos, porque murió
el 21 de abril de 1618. Pero el P. José, que no per
Calvarlo. Monte situado fuera de las murallas dia de vista el nuevo instituto, dió á las religiosas
de Jerusalen, llamado en hebreo Golgotha, cráneo ó que quisieron abrazarle el nombre de Hijas del Cal
cabeza calva, porque no tenia verdor; en este silio fue vario, logrando en 1620 que la reina madre, Maria
en donde Jesucristo fue crucificado. Santa Helena hizo de Médecis, les hiciese una casa cerca del palacio de
construir allí una iglesia. Se dice en el Evangelio, que Luxemburgo: en 1638 adquirió otro convento en las
en la muerte del Salvador hubo un temblor de tier Huertas; se compró el terreno á espensas de la con -

ra, y que se hendieron las piedras. Viajeros igleses gregacion, siendo construido por la liberalidad del
é historiadores muy instruidos, Millar, Fléming, rey, del cardenal de Richelieu y de madama Com
Maundaell, Schaw y otros, atestiguan que la roca del balet, su sobrina, despues duquesa de Aiguillon. El
Calvario no está hendida naturalmente segun las ve Padre José las dió una constitucion particular que
nas de la piedra, sino de una manera evidentemente aprobó el Papa Gregorio XV, erigiendo en su bula,
sobre natural «Si yo quisiera negar, dice S. Cirilo de en congregacion de la Orden de S. Benito, bajo el tí
»Jesusalen, que Jesucristo ha sido crucificado, este tulo de nuestra Señora del Calvario, los conventos de
»monle de Golgolha sobre el que al presente estamos Paris, de Poitiers, de Angers y demas que se funda
reunidos me lo enseñaria». Cat. 13. sen en lo sucesivo.
En los primeros siglos de la Iglesia se creia, en fe El monasterio fundado en el sitio llamado las
de una tradicion de los judios, que Adan habia sido Huertas en Paris es conocido con el nombre de Cru—
enterrado en el Calvario, y que Jesucristo habia sido cifiacion, para distinguirlo del de Luxemburgo; y
crucificado sobre su sepultura, á fin de que la sangre la directora ó generala de la Orden reside regular
derramada por la redencion del mundo purificara mente en él. Lo gobiernan tres superiores princi—
 CAL 284) CAL
pales que son cardenales y prelados, habiendo ade culto esterior y la disciplina de la Iglesia católica.
mas un visitador y una generala. Está esento de la Se ve que este heresiarca para formar su sistema
jurisdicion de los órdinarios; los principales superio reunió los errores de casi todas las sectas conocidas,
res son perpetuos; el visitador dura solo tres años, la de los predestinacianos, Vigilancio, donalistas, ico
pero pueden reelegirle; la generala lo es tambien por noclastas y Berenger; que repitió lo que habian di—
ires años, aunque pueden continuar eligiéndola de cho ya los albigenses, los valdenses, los begardos, los
capítulo en capítulo hasta doce consecutivos de ejer— fratricelos, los vicleitas, los husitas, Lutero y los
cicio, y no mas. Pasado este tiempo se queda por anabaptistas.
espacio de un año, como la última de la comunidad, Acerca de la Eucaristía no dice como Zwinglio, que
no pudiendo elegirla priora hasta que pasen tres. es un simple signo del cuerpo y sangre de Jesucristo;
Mientras es generala tiene cuatro asistentas para que dice que recibimos en ella verdaderamente uno y otro;
la auxilien con sus consejos, y una de estas la acom pero solo por la fe; mas sin embargo el cuerpo y san
paña en la visita que tiene que hacer á los monaste gre de Jesucristo no existen allí con el pan y el vino
rios de su congregacion. Cuando se trata de celebrar ó por empanacion, como quieren los luteranos, ni por
su capítulo general, las prioras de los monasterios y transustanciacion, como sostienen los católicos.
su comunidad envian por escrito sus votos al ca— Asi desde el nacimiento de la reforma en 1517 has
pítulo general por medio de la persona elegida por la 1532, vemos ya tres sistemas diferentes, formados
todas ellas. El visitador, que tiene la presidencia, sobre lo que dice la Escritura acerca del sacramento
junto con tres escrutadores elegidos por la comuni de la Eucaristía. Segun Zwinglio las palabras de Je
dad de donde se celebra, abre las cartas, cuenla los sucristo, este es mi cuerpo, solo significan este es el sig
votos, y declara generala, asistentas y prioras á las no de mi cuerpo. Calvino dice que espresan algo mas,
que tienen mas votos. La congregacion se compone de pues que Jesucristo habia prometido darnos su carne
veinte casas, de las cuales la primera se halla, esta á comer. Joan., c. 6, y.52. Luego, le contesta Lu
blecida en Poitiers, otras dos, como hemos dicho, lo tero, el cuerpo de Jesucristo existe allí verdadera
están en Paris, siete ú ocho en la Bretaña, y las de mente con el pan y el vino. Nada de eso, replica Cal
más en Orleans, Chinon, Maguncia, Vendome, Lou vino; si se admitiera una presencia real, necesaria
dun y en Tours. La abadía de la Trinidad de Poitiers menle habia que admitir la transustanciacion como
se unió á esta congregacion, como tambien el mo los católicos y el sacrificio de la misa. He aquí cómo
nasterio de benediclinas de Bauge. El vestido de las se ponian de acuerdo estos doctores, suscitados todos
religiosas del Calvario es una túnica de color oscu por Dios para reformar la Iglesia, y todos inspirados
ro, con un escapulario negro que se ponen sobre la por el Espíritu Santo.
toca como las carmelilas descalzas. En el coro se Si se compara lo que enseña Calvino sobre la pre
ponen un manto negro, y están descalzas des destinacion, con lo que dice de la falta de libertad en
de 1.° de mayo hasta la fiesta de la Exaltacion de el hombre, veremos que Bolseec tenia razon para
la Santa Cruz. (Estracto del diccionario de Juris echarle en cara que hacia á Dios autor del pecado;
prudencia). - blasfemia que horroriza. Toda la diferencia que hay
entre los predestinados y los reprobados consiste en
Calvimismo. Doctrina de Calvino y de sus sec que Dios no imputa los pecados á los primeros y sí á
tarios en materia de religion. los segundos; un Dios justo, ¿puede impular á los
Se pueden reducir á seis puntos principales los hombres pecados que no son libres, condenar á los
dogmas esenciales del calvinismo, 1.ºQue Jesucristo unos y salvar á los otros precisamente porque asi le
no está realmente presente en el sacramento de la place? El abuso que hacia Calvino de muchos pasajes
Eucaristía, que tan solo le recibimos en ella por la de la Sagrada Escritura para establecer esta odiosa
fé. 2." Que la predestinacion y la reprobacion son doctrina, era una prueba de lo absurdo de su preten
absolutas, independientes de la presciencia que Dios sion; que solo la Escritura fuese la regla de nuestra
tiene de las obras buenas ó malas de cada particular; creencia.
que tanto el uno como el otro de estos decretos de Tambien el pretendido decreto absoluto de predes
pende de la pura voluntad de Dios, sin tener en cuen tinacion y reprobacion, causó entre los protestantes
ta el mérito ó demérito de los hombres. 3.º Que Dios las disputas mas animadas; dió origen á dos sectas,
- da á los predestinados una fé y una justicia inadmi la de los infralapsarios y supralapsarios, molivándo
sibles, y no les imputa de ningun modo sus pecados. se una infinidad de escritos por una y otra parte.
4.” Que á consecuencia del pecado original, la volun Para esquivar el sentido de las palabras de Jesu
tad del hombre se ha debilitado de tal suerte, que es cristo, que nos aseguran de su presencia real en la
incapaz de hacer ninguna buena obra meritoria de Eucaristía, oponia Calvino otros pasajes en los que es
salvacion, y aun ninguna accion que no sea viciosa é reciso recurrir al sentido figurado; y para esplicar
imputable como pecado. 5." Que le es imposible re os pasajes, que parecen suponer que Dios es el autor
sistir á la concupiscencia viciosa; que todo el libre del pecado, no queria hacer uso de aquellos en que
albedrío consiste en estar esento de coaccion y no de se dice que Dios odia, detesta y prohibe el pecado,
necesidad. 6." Que los hombres son justificados so que tan solo lo permite, pero que no es su autor.
lo por la fé, y por consiguiente que las buenas obrasLa inamisibilidad de la justicia en los predestina
en nada contribuyen para la salvacion; que los sa dos, y la inutilidad de las buenas obras para salvar
cramentos no tienen mas eficacia que la de escitar se eran otros dos dogmas que conducian á las mas
la fé. Calvino no admite mas que dos sacramentos, erniciosas consecuencias. Por mas que Calvino, pa
el bautismo y la cena; rechaza absolutamente el iase esto por medio de todas las sutilizas posibles,
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los simples fieles no estan en estado de enfender esta Acaso ocurrirá preguntar cómo un sistema tan mal
obscura teologia; por otra parte se opone directa concebido y razonado, capaz de hacer desesperará
mente á los pasajes mas terminantes de la Sagrada las alinas virtuosas y afirmar á los pecadores en sus
Escritura; no es buena mas que para alimentar una crímenes, de considerar á Dios como un tirano, mas
loca presuncion y separar al cristiano del camino de bien que como un señor amable, pudo encontrar sec—
las buenas obras. tarios en casi todas partes de Europa. Trataremos de
Otra contradiccion era la de sostener que solo Dios esplicar este fenómeno en el artículo siguiente. Entre
puede instituir sacramentos; que segun la Escritura, los controversistas que han refutado el calvinismo son
no instituyó mas que el bautismo y la cena, y decir los mas célebres y ócupan el primer lugar Bossuet,
que estos sacramentos no hacen otro efecto mas que Arnaldo, Nicole, Papin y Peliston.
escitar la fé. La institucion de Dios es necesaria para Mosheim reduce á tres ó cuatro puntos principales
establecer un signo capaz de escitar la fé? la doctrina que divide á los calvinistas de los lute—
Solo por la exigencia de su sistema era por lo que ranos. 1.º Con respecto á la cena, estos dicen, que el
Calvino negaba la presencia real de Jesucristo en la cuerpo y sangre de Jesucristo se dan en ella verdade.
Eucaristia. Si ya confesaba que en virtud de la insti ramente á los justos y á los impios, aunque de una
tucion del Salvador las palabras que pronunció tienen manera inesplicable; segun los calvinistas este cuerpo
el poder de hacer presentes su cuerpo y sangre, por y sangre no estan allí mas que en figura, solo presen
qué no convenir que en virtud de la misma institucion, tes por su fé; pero no todos lo entienden de la misma
otras palabras tienen la fuerza de producir la gracia manera. El traductor de Mosheim comprendió mal
en el alma de un fiel dispuesto á recibirla? este punto de la creencia de los luteranos, díciendo
Mosheim y su traductor convienen que sobre este que aseguran que el cuerpo y sangre de Jesucristo es
punto la doctrina de Calvino no es inteligible. tan materialmente presentes en el sacramento, jamás
Mas adelante los calcinistas conocieron los incon - confesaron los luteranos esta presencia material Di
venientes del sistema de su maestro; apenas conser— cen que el cuerpo y sangre del Salvador son dados y
varon en su integridad uno solo de sus dogmas, carn recibidos en la Eucaristia por la comunion, sin querer
biaron algunos y otros los suavizaren y modificaron. confesar que están en ella presentes independiente
Casi todos siguen la opinion de Zuinglio sobre la Eu— mente ¿ accion de comulgar. 2.º Segun los calvi—
caristia, no la consideran sino como un signo. El ma nistas, el decreto por el cual Dios desde la eternidad
yor número rechazaron los decretos absolutos de la ha predestinado á tal hombre para el cielo y á cual
predestinacion, y se han hecho pelagianos. Véase otro para el infierno, es absoluto, arbitrario, inde
ARMINIANISMo. endiente de la prevision de los méritos ó deméritos
Los teólogos católicos atacaron en detalle todos los ¿ del hombre; segun los luteranos este decreto
dogmas forjados por Calvino, aun con los paliativos es condicional y dirigido por la presciencia. 3.º. Los
que adoptaron sus discípulos. Han demostrado la opo calvinistas rechazan todas las ceremonias como su—
sicion formal de estos pretendidos dogmas con la Sa ersticiones; los luteranos piensan que las hay indi
grada Escritura, con la tradicion antigua y constante erentes y que pueden conservarse como las pinturas
de la Iglesia, y con las verdades que todo cristiano de las iglesias, las vestiduras sacerdotales, las hos
está obligado á admitir. Este reformador acusaba á tias para consagrar la Eucaristia, la confesion auri
la lglesia romana de haber cambiado la doctina de cular de los pecados, los exorcismos en el bautismo,
Jesucristo establecida por los apóstoles; le han pro— muchas festividades, etc. Mas Mosheim conviene en
bado hasta la evidencia que él mismo es el que la ha que estos diversos artículos de creencia suministran
innovado ; que no hay en todo el universo ninguna materia para un gran número de cuestiones secun—
secta quehaya profesado el calvinismo; que está pros— darias. ..." Ninguna de estas dos sectas tiene principio
cripto y detestado en las sociedades que se han sepa alguno fijo respecto al gobierno de la Iglesia; en mu—
¿ de la Iglesia romana hace mas de mil y cuatro chos parajes los luteranos conservaron obispos bajo
cientos años. Lo que causa ya un daño terrible á este el nombre de superintendentes: en otros no tienen más
sistema es que de él han nacido el socinianismo y el que un simple consistorio, como los calvinistas; en
deismo. V. PRoTESTANTEs. unos y otros, el poder civil de los soberanos y de los
Desde su establecimiento se ha sostenido siempre magistrados tiene mas ó menos influencia en los ne—
en Ginebra, en donde nació; de los trece cantones sui gocios eclesiásticos, segun los lugares y circunstan—
zos hay seis que lo profesan. Hasta 1572 fue la reli cias. Propiamente hablando el único punto en que
gion dominante en Holanda; aunque desde entonces convenian, era en su odio y animosidad constante
esta república haya tolerado todas las sectas por ra— contra la Iglesia romana. Historia eclesiástica del ti
zon de política, el calvinismo rígido fue siempre la re glo XVI, secc. 3.", 2.° part., c. 2. S. 29, 32.
ligion del Estado. En Inglaterra ha ido decayendo des r

Calvinisnan, perfeccionado. Bajo es

de el reinado de Isabel, á pesar de los esfuerzos que
han hecho los puritanos ó presbiterianos para soste le título apareció en 1796 un nuevo sistema sobre la
nerla. Desde que la Iglesia anglicana adoptó opinio salvacion universal compuesto por Santiago Hunting—
nes mas moderadas , cuéntase el calvinismo entre las lon, ministro de Gonvetry, en Connecticut, que mu
sectas no conformistas, y simplemente toleradas. En rió el año anterior. Segun él, la ley y el Evangelio son
la Escocia y Prusia se encuentran todavia en todo su diametralmente opuestos. Las amenazas de la ley son
vigor. En algunas partes de Alemania, se halla mez el grito de la justicia, pero el Evangelio no contiene
clado con el luteranismo: en Francia se toleró hasta amenazas, no es mas que la buena nueva; por la ley
la revocacion del edicto de Nantes. -
soumos dignos de todos los castigos; por Jesucristo lo
º T0MO . 2
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somos de la vida eterna. La ley proclama lo que me la religion. Los seglares, que desde el reinado de Fran
recemos; el Evangelio lo que Jesucristo mereció cisco I habian adquirido conocimientos, despreciaban
nosotros, porque ha sustituido á todos los culpables, á los teólogos, y se creian por lo menos tan capaces
todos nuestros pecados le son transferidos, los ha es como ellos para juzgar en materias de religion.
piado por nosotros, y á todos nos salvará. No debe sorprendernos que los emisarios de Lute
ro, de Melanchthon y Bucero, que eran literatos que
Calvinistas. Sectarios de Calvino, se los llama hablaban y escribian bien, que habian estudiado las
tambien protestantes, pretendidos reformados, sacra lenguas y la historia, encontrasen entre los literatos
mentarios, hugonotes. Véase estas palabras. discípulos prontos á ser seducidos. Bastaba declamar
Creemos apropósito investigar las causas que con contra el papa, contra el clero secular y regular, con
tribuyeron á los progresosque estos sectarios hicieron tra los abusos en punto á religion paraser escuchados.
con tanta rapidez en Francia, lo que digamos acer La confesion, los ayunos, las obras satisfactorias, los
ca de esta servirá respectivamente para los demas votos, las prácticas del culto público y los honora
paises de Europa. - rios de los ministros de la religion eran mirados como
En todas partes se echaba de ver á principios del un yugo, se habian cansado de todo esto, y veian
siglo XVI la necesidad de una reforma; los deseos un medio para desembarazarse de ello.
que consignaron sobre este ¿ los concilios de Cons
.

El veneno derramado en secreto ganó poco á poco

tancia y Basilea, las medidas que tomaron para pro terreno, é infectó á los hombres de todos estados;
curarla, tanto en el gefe como en los miembros de la los que le recibieron se admiraron de verse en tan
Iglesia no tuvieron éxito; nunca llegaba el caso de lle gran número desde su origen. Los libros de Lutero,
varla adelante. Todo el mundo estaba descontento con de Melanchthon, de Carlostadio y de Zinglio se mul
aquel estado de cosas, todo anunciaba una próxima tiplicaron en Francia, dieron origen á otros: por
revolucion. todas partes pululaban los libros de piedad, trata—
1." A fines del siglo XV, Alejandro VI escanda dos dogmáticos y otras polémicas; inundaron el rei
lizó la Iglesia con sus costumbres y ambicion. Ju no, y encendieron la tea del fanatismo. Ni los decre
lio II su sucesor, mas ocupado en las guerras y con tos de la facultad de teologia, ni las pastorales de los
quistas que en el gobierno de la Iglesia, fue im obispos, ni la vigilancia de la policia pudieron con
placable enemigo de Luis XII y de la Francia. Suble tener sus progresos. Poco importaba que se adoptara
vó contra este rey toda la Iglesia, lanzó contra él una tal ó cual doctrina, con tal que se cambiase de reli
escomunion, puso un entredicho al reino , y dispen gion. Apareció la Institucion de Calvino; esta obra
só á los súbditos del juramento de fidelidad. Tanto era seductora, y fue recibida con aclamacion: gran
como era amado Luis XII y merecia serlo, era de ¿ del reino se encontró bien pronto calvinista sin
testado Julio II. Leon X, que le sucedió, no manifestó aberlo previsto.
mas virtudes pontificales que celo por la reforma. Fá Este partido, que conoció sus fuerzas, se lanzó á
vias de hecho por medio de pasquines y libelos inju
cilmente se prevee que el desconlento contra los papas
traeria bien pronto una revolucion contra el yugo de riosos; alarmados los magistrados y el gobierno, re
su autoridad. currieron á los suplicios; era ya demasiado tarde; es
2.° Los religiosos, y principalmente los mendi tas ejecuciones agriaron mas los ánimos, y enfure
cantes, ya por celo, d or interés atraian los fieles cieron á los calvinistas.
á sus iglesias por medio de devociones, con frecuen No echemos en olvido que bajo el dominio de los
cia, mal arregladas, multiplicando las cofradias, las Valois estaban los pueblos tan ¿ del go—
indulgencias, las reliquias, los milagros, las histo bierno como del estado de la religion. Francisco II,
rias falsas y apócrifas, haciendo con este motivo cues príncipe negligente, decargó todo el peso del reino
taciones lucrativas; se entrometian en los derechos sobre los príncipes de Guisa; estos habian ganado el
de los curas y sobre la jurisdicion de los obispos, ale favor del clero por su celo en defensa de la religion
gaban privilegios obtenidos de la Santa Sede, etc. Al católica; los grandes, que trataban de apoderarse de
gunos de los teólogos que escribieron contra estos abu ¿
la autoridad de aquellos, se de parte de los
sos no guardaron toda la moderacion posible é hicie calvinistas. La conjuracion de Amboise que forma—
ron recaer sobre las mismas prácticas una parte del ron con este designio, estalló y no tuvo éxito; el cas—
vituperio que merecian los religiosos. tigo de los conjurados no sirvió mas que para aumen
3." La jurisdicion esclesiástica no estaba conte tar el ódio y preparar nuevos proyectos de re
nida en aquellos límites que era de esperar, los tri belion.
bunales civiles se quejaban de ello. Se habia intro Al subir Carlos IX al trono, trató aunque en vano,
ducido el desórden en la manera de obtener, poseer de calmar los ánimos de ambos partidos; la amnistia
y administrar los beneficios; en general el clero se concedida por él á los protestantes, prueba demasia
cular era menos instruido y estaba menos arregla do los escesos á que estos se habian entregado. Un tu
do que en el dia, y los pueblos se resentian de esta multo que tuvo lugar por casualidad en Vassi, y en
desgracia. En una palabra, todos los abusos que se el que fueron muertos muchos protestantes, le sirvió
corrigieron ó previnieron por los decretos del Con de pretesto para levantar un ejército y empezar una
cilio de Trento se hallaban casi generalmente espar uerra civil. Pronto se estendió á todo el reino, y se
cidos. izo por una y otra parte con la crueldad que puede
...”... Los teólogos, limitados á la parte escolástica, inspirar el fanatismo. Se suspendió dos veces por
no cultivaban ni las ciencias sagradas, ni las bellas le medio de los edictos de pacificacion, ó mas bien de
tras, consideraban este estudio hasta peligroso para perdon; en la tercera obtuvieron de sus soberanos los
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protestantes todo lo que pedian, y algunas plazas Aun cuando no se tuviera que vituperar mas
para su seguridad. que el incendio de muchas bibliotecas ricas, tanto en
Un rey que se vé reducido átratar con sus súbditos,
Francia como en Inglaterra, seria lo suficiente para
convertidos en enemigos suyos, los perdona dificil hacer detestar el espíritu que los animaba.
mente esta injuria: Carlos IX, indignado de las con No obstante, una multitud de incrédulos, siempre
diciones á que se le habia hecho acceder, aterrado prontos para apoyar el partido de los sediciosos, quie
de lo que tenia que temer de un partido siempre ame ren hacer recaer sobre la religion católica los escesos
nazador, concibió el funesto proyecto de deshacerse á que se entregaron los calvinistas, y todos los males
de los gefes del partido hugonote, y permitió que los ue fueron su consecuencia. Dicen que los defensores
asesinaran. El pueblo, una vez impulsado al asesi ¿ la religion dominante se levantaron con furor con
nato, no se limito á inmolar á los gefes; un número tra los sectarios, armaron contra ellos los poderes, ar
infinito de católicos satisfacieron sus odios particula rancándoles edictos sanginarios, soplaron en todos
res, llevaron la crueldad hasta el último esceso, los corazones la discordia y el fanatismo, y culparon
dieron lugar de este modo á una nueva guerra u sin pudor á sus víctimas sobre losdesórdenes que ellos
Véase S. BAarolome y la adicion á esta palabra. solos habian producido. ¿Es esto verdad?
Enrique III, para concluir esta guerra, se vió 1.º Son conocidos los principios de los primeros
obligado á concederá los calvinistas un quinto edicto reformadores, Lutero y Calvino; consignados estan
todavia mas favorable para ellos que los anteriores: en sus obras. En 1520, antes de que se diera ningun
los cátolicos descontentos formaron la Liga, que la edicto contra Lutero, publicó su libro de la libertad
llamaron malamente la santa union: el temor de ver cristiana, en el que decidia que el cristiano no está
¿ la corona á la cabeza de un príncipe herege, sujeto á ningun hombre, y declamaba contra todos
izo á los católicos tan intratables como los hugo los soberanos: este fue el motivo de la guerra de los
noles. anabaptistas. En sus tesis establecia que era necesa
Enrique lV fue educado desgraciadamente en el rio ir á los alcances del papa, de los reyes y de los
calvinismo; tuvo que conquistar su reino de los de la Césares que tomaban su partido. En su tratado del
Liga. Por último, victorioso y universalmente reco— Fisco comun queria que se saquearan las iglesias, los
nocido, concedió á los calvinistas que le habian ser— monasterios y los obispados. En su consecuencia, se
vido útilmente un nuevo edicto de pacificacion, se puso por bando del imperio en 1521. ¿Fue acaso el
mejante á los anteriores: con ciudades para su segu clero el que dictó este decreto? La gran mácsima de
ridad: este fué el edicto de Nantes. este fogoso reformador era que el Evangelio siempre
Feliz la Francia si la paz hubiera estinguido el habia producido turbulencias; que es necesaria sangre
fanatismo pero todavia subsistia. Enrique IV fue la para establecerlo. Tal es el espíritu de que estaban
víctima y pereció como Enrique III, por un asesinato. animados aquellos discípulos suyos que vinieron á pre
dicarle á Francia.
En la época de Luis XIII los protestantes volvieron
á tomar las armas: fueron vencidos, y sus plazas de Calvino escribia que era preciso esterminar á los
molidas. Mas el edicto de Nantes fue confirmado res pícaros que se oponian al establecimiento de la refor
pecto de los demas artículos. Luis XIV, mas poderoso ma, que unos mónstruos semejantes debian ser aniqui
y absoluto que ninguno de sus predecesores, revocó lados: apoyó estra doctrina con su ejemplo, é hizo un
el edicto de Nantes en 1685, y desde entonces los cal tratado espresamente para probarlo. Véanse las car
vinistas fueron privados en Francia del ejercicio pú tas de Calvino á Mr. de Poet et fidelis espositio, etc.
blico de su religion. No nos atreveriamos á ecsaminar Ahora preguntamos nosotros: ¿predicadores que se
si esta revocacion fué injusta ó legítima, si perjudicó anuncian de esta suerte deben ser tolerados en ningun
tanto al reino como han pretendido algunos escritores estado culto?
modernos. 2.° El primer edicto dado en Francia contra los
Esta narracion, muy compendiada basta para dar calvinistas se publicó en 1534. Por entonces la refor
una idea de los males que originó á la Francia una ma habia incendiado la Alemania, habia conculcado
pretendida reforma, que lejos de hacer la fé mas pura en Francia las imágenes, diseminado libelos sedicio
y la moral mas perfecta, renovó una multitud de er sos y fijado pasquines injuriosos á las puertas del Lou
rores condenados en los diferentes siglos de la Iglesia, vre; Francisco I temió sobre sus estados las mismas
cuyos dogmas minan los principios de la moral, fun turbulencias que él mismo habia formado en Alema
dados en la libertad del hombre, colocan á las almas nia. Tal fué la causa de las primeras ejecuciones he
timoratas en la desesperacion, y tienen á los crimina chas en Francia. Cuando se quejaron de esto los
les en una funesta seguridad; quita todo motivo de príncipes protestantes de Alemania, Francisco I res
practicar la virtud, y ha inspirado desde el princi pondió que no habia hecho mas que castigará los se
io á sus sectarios el mismo espíritu derebelion contra diciosos. Por el edicto de 1540, los proscribió como
os poderes seculares que contra la autoridad ecle perturbadores del Estado y del orden público; y nadie
siástica. En el dia, vueltos de su antiguo fanatismo, se atrevió todavia á acusar al clero de tomar parte en
sus doctores se han visto obligados á convenir en que estos edictos. Un célebre escritor de nuestros dias
la Iglesia romana, de la cual se separaron, no enseña conviene en que el espíritu dominante del calvinismo
ningun error fundamental, ni sobre el dogma, ni so era el de erigirse en república. Tratado sobre la His
bre la moral, ni sobre el culto; que un buen católico toria general, etc. -

puede salvarse en su religion. ¿Para qué, pues, se ne 3." Desafiamos á los calumniadores del clero á
cesitaba conmoverá toda la Europa para destruirla que citen un solopais, una sola ciudad, en que los cal
y establecer el calvinismo sobre sus ruinas? cinistas hayan dominado y sufrido el ejercicio de la
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religion católica. En Suiza, Holanda, Suecia, é Ingla primeros de haber enseñado constantemente que cuan
terra, la proscribieron, y muchas veces contra la fé do un soberano falta á sus promesas, sus subditos no
de los tratados. ¿La permitieron jamás en Francia en estan obligados á guardar el juramento de fidelidad,
las ciudades que ocupaban para su seguridad? Una y de haber fundado sobre este principio todas las gue
mácsima sagrada de nuestros adversarios, es que es rras civiles de que fueron autores.
preciso no tolerar á los intolerantes; pues bien, nin Les representa que cuando se ha tratado de escri
guna religion hubo jamás tan intolerante como el cal bir contra el Papa han sostenido con calor los dere—
vinismo; veinte autores, aun protestantes, han conve chos é independencia de los soberanos; que cuando
nido en esto mismo. Desde su origen en Francia y en han estado descontentos de estos han colocado á la
las demas partes, los católicos se han visto precisados vez á los soberanos bajo la dependencia de los pueblos,
á alejaró esterminar á los hugonotes, ó ser ellos mis quesoplaron el frio ó el calor, segun el interés del lu
mos esterminados. gar y del momento. Les manifiesta las malas conse
l." Si con toda la flema que pueden inspirar la cuencias de sus principios con respecto á la pretendi
caridad cristiana, el amor á la verdad, el respeto á las da soberanía inalienable del pueblo, y en el dia nues
leyes el verdadero celo por la religion, los prime tros incrédulos políticos se atreven á ponderarnos es
ros reformadores se hubiesen dedicado á probar, que tos mismos principios como un nuevo y precioso des
la Iglesia romana no era la verdadera Iglesia de Je— cubrimiento; no saben que esta es la doctrina reno
sucristo; que su gefe visible no tiene ninguna autori— vada de los hugonotes. No hay, continúa Bayle, nin
dad de derecho divino; que su culto esterior es con gun fundamento de tranquilidad pública que no mi
trario al Evangelio; que los soberanos que la protegen neis, ningun freno, capaz de contener á los pueblos
comprenden mal sus intereses y los de sus pueblos, etc; en la obediencia, que no rompais..... De esta suerte
si al demandar la libertad de conciencia bubieran habeis cumplido los temores que se concibieron de
prometido solemnemente no molestar á los católicos, vuestro partido, desde que apareció y que hizo que se
no perturbar su culto, no in uriará los sacerdotes, etc. estableciera como principio, que el que rechaza la au
hubieran ¿ su palabra, estamos seguros de toridad de la Iglesia, no está lejos de sacudir la de los
que el gobierno hubiera dejado de perseguirlos. Yaun poderes soberanos, y que despues de haber defendi
cuando el clero hubiera solicitado edictos sanguina do la igualdad entre el pueblo y los pastores, no se
rios, los habria obtenido? Todo el mundo sabe lo tarda tambien en sostener la igualdad entre el pueblo
cristiana y celosa que la corte era entonces por la re y los magistrados seculares.
ligion. Bayle va todavia mas lejos: prueba que los calvi :
5.º Suponiendo que la matanza de Vassi fuese nistas de Inglaterra contribuyeron tanto al suplicio
un crímen premeditado, lo que no es cierto porque fué de Carlos l como los independientes; que su secta es
un hecho particular del duque de Guisa y de sus alle mas enemiga del poder soberano que ninguna otra
gados era este un motivo legítimo para tomar las ar secta protestante; que esto es lo que les hace irrecon
mas en lugar de quejarse al rey y pedir justicia? Pe ciliables con los luteranos y anglicanos, Demuestra
ro los calvinistas habian resuelto la guerra, y no es— que los paganos enseñaron una doctrina mas pura
peraban mas que un pretesto para declararla. Desde que la suya respecto á la obediencia que se debe á las
aquel momento todo lo quisieron obtener por la fuer leyes y á la patria; refuta todas las malas razones
za y con las armas en la mano. El clero no tuvo nece. con que han querido justificar sus frecuentes rebelio
sidad de soplar el fuego de la discordia para animar nes. Manifiesta que la liga de los católicos para es—
á los católicos á la venganza; los hugonotes furiosos cluir á Enrique IV del trono de Francia, porque era
los dieron sobrados motivos para que ejercieran re— hugonole, fue mucho menos odiosa y criminal que la
presalias. Estos debieron esperar el ser tratados como liga de los protestantes para privar al duque de Yora
enemigos siempre que el gobierno tuviese suficiente de la corona de Inglaterra, pórque era católico. Tal
fuerza para castigarlos. es el análisis del avisa á los refugiados que ningun cal
Es, pues, una calumnia grosera el atribuir al clero y vinista ha tratado de refutar.
al celofanático de la religion los escesos que se come En su respuesta á la carta de un refugiado en 1688
tieron en aquella ép0ca; el loco del fanatismo estaba habia ya demostrado que los calvinistas son mucho
entre los calvinistas y no entre los católicos. mas intolerantes que los católicos, que siempre lo fue
6° No tenemos necesidad de otras pruebas mas, ron, que lo son todavia, y que han probado por sus es
que la que nos suministran nuestros mismos adver critos y conducta que su principio invariable es que
sarios. Bayle, que no debe ser sospechoso á los incré no hay soberano legítimo, á no ser que sea ortodoxo
dulos, que vivia eutre los calvinistas y los conocia muy á su manera, Les haprobado, que ellos mismos fueron
bien, les ha viluperado en su aviso á los refugiados, los que obligaron á Luis XIV á revocar el edicto de
en 1690, el haber llevado la licencia de los escritos sa Nantes; que en esto no hizo mas que seguir el ejem
tíricos á un esceso de que no habia habido ejemplo, plo de los estados de Holanda, que no cumplieron nin
el haber introducido desde su orígen en Francia el uso guno de los tratados que habian hecho con los católi
de los libelos infamatorios que apenas se conocian allí; cos. Tambien demostró que todas las leyes de los es
le recuerda los edictos por los cuales se vieron obli— tados protestantes eran mas severas contra el catolicis
gados áreprimir su audacia y la malignidad con que mo, que las de Francia contra el calvinismo. Trae á la
sus doctores, con el Evangelio en la mano, calumnia memoria el suceso de los emisarios que los hugono
ron á los vivos y á los muertos. Les pone de manifies tes enviaron á Cromwel en 1650, los ofrecimientos
to la moderación y paciencia que los católicos en se que le hicieron y las resoluciones sediciosasque toma
jmeante caso mostraron en Inglaterra. Acusa á los ron en sus sínodos de la Guyena—Baja. Se mofa de
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sus lamentaciones por la pretendida persecucion que ambicion y despotismo de los papas perdonan á Cal
esperimentan, y les declara que su conducta justifi vino el ¿ llevado mas lejos; le escusan en ra
ca plenamente la severidad con que se les ha trata zon, dicen, á sus servicios y virtudes. En dónde están,
do en Francia. Obras de Bayle, t. 2. p. 544. pues, las virtudes de ese fogoso reformador?
El escritor que en 1758 hizo la apología de la re Bolsse , carmelita apóstala, le probó que por su
vocacion del el de Nantes, apenas ha hecho otra doctrina hacia á Dios autor del pecado; Calvino, le
cosa mas que repelir las mismas acusaciones y los hizo desterrar, y por él le hubiera impuesto las penas
mismos hechos que Bayle habia echado en cara, á aflictivas como pelagiano y sedicioso. Castalion, por
los calvinistas en 1688 y 1690. No obstante, todos haber atacado tambien la doctrina de Calvino tuvo
nuestros políticos anticristianos levantaron la voz con que salir de Ginebra. Ni la Escritura, ni la inspiracion
tra él: han querido hacerle pasar por un bola fuegos, de cada fiel era la regla de fé en aquella ciudad, sino
por un fanático ¿qué hubieran dicho, si este autor la autoridad despótica de Calvino.
ubiese declarado altamente que copiaba á Bayle Miguel Servet, que habia atacado el misterio de
casi palabra por palabra? V. GUERRAs DE RELIGIóN, la Santísima riñº , perseguido en Francia, se
PRoTESTANTEs, TolERANCIA, etc. salvó en Ginebra; Calvino le hizo prender, le conde
nóá ser quemado vivo, y se ejecutó la sentencia. Pa
Calvino, (Juan) fundador de la secta que lleva ra justificar su conducta, Calvino compuso un trata
todavia su nombre: nació en Noyon en 1509, y mu do, en el que quiso probar que era necesario casti
rió en Ginebra en 1564. Hay en la conducta de este gar con la pena de muerte á los hereges. Asi, estos
célebre reformador ciertos rasgos característicos que ministros que sostenian que la Escritura es la única
importa conocer para formarse una idea esacta del regla de fé, que cada particular es juez del sentido
calvinismo. de la Escritura, condenaban como herege á un es
Instruido por uno de los emisarios, que Lutero y critor, porque no veia en ella el mismo sentido y
sus asociados habian enviado á Francia, vió que es los mismos dogmas que pretendian ver en la misma:
los reformadores de la religion no tenian ni, princi mientras que se desencadenaban contra los magistra
ios fijos, ni un cuerpo de doctrina, ni profesion de dos que castigaban con la muerte á los hereges en
e, ni tampoco ningun reglamento fijo de disciplina; Francia, hacian allí mismo quemar á Servet, porque
emprendió formar un sistema completo de teología le juzgaban herege.
conforme á sus opiniones, y lo consiguió en su Insti Gentilis, Okin y Blandrat, que quisieron reno
tucion cristiana que publicó en 1536. var en Ginebra las opiniones de Servet, les faltó poco
Establece como principio que la única regla de fé para ser tratados de la misma manera. Gentilis fué
á quien un fiel debe consultar es la Sagrada Escritu reducido, á prision, y obligado, á retraclarse; Okin
ra, que Dios le hace conocer en verdad, y el verda— desterrado, y Blandrat, perseguido en justicia, se le
dero sentido por una inspiracion particular del Es obligóá firmar una profesion de fé y á huir.
píritu Santo. Trátase de saber cómo puede distin No se debe creer que ha cesado entre el calvinis
guirse con seguridad esta pretendida inspiracion del mo esta contradiccion entre los principios de los
fanalismo de un impostor. reformadores y su conducta. Sus partidarios siempre
Calvino, retirado á Ginebra, en donde Farel y Vi han continuado enseñando, que la Sagrada Escritura
ret habian establecido las opiniones de los reforma es la única regla de fé, que Dios alumbra á cada fiel
dores de Alemania, empezó por oponerse á un de para juzgar del verdadero sentido de la Escritura,
creto del sínodo de Berna, que arreglaba la forma que el sentir de los santos Padres, los decretos de los
del culto; se creyó mejor inspirado que este sínodo. concilios y las decisiones de la Iglesia no son mas
Obligado á retirarse áStrasburgo, y ¿ despues que una autoridad humana, á la que nadie está obli
á Ginebra adquirió allí un imperio absoluto, hizo un gado á deferir, y al mismo tiempo no han cesado de
calecismo, estableció un consistorio, arregló la forma celebrar sínodos, formar profesiones de fé, condenar
de las oraciones y de las predicaciones, la manera errores, y escomulgar á los que los sostenian; asi
de celebrar la cena, etc.... y revistió á su consisto trataron á los socinianos, á los anabaptistas y á los
rio con el poder de imponer censuras y escomulgar. arminianos.
De suerte, que este predicador, despues de haber Un deista de nuestros dias, educado entre los cal
declamado contra la autoridad que los pastores de vinistas, les ha echado en cara con vehemencia esta
la iglesia católica se atribuian, usurpó él mismo una contradiccion. «Vuestra historia, les dice, está llena
autoridad cien veces mas absoluta, á la que estaba » de hechos que manifiestan por vuestra parte una
obligado á ceder la inspiracion que concedía á todos »inquisicion muy severa, y que de perseguidos, se
los fieles. » convirtieron los reformadores en perseguidores. A
El traductor inglés de Mosheim, que dice que Cal— » fuerza de disputar contra el clero católico el cle
cino aventajó á todos los demas reformadores en sa »ro protestante se hizo disputador y quisquilloso.
ber y en talento, conviene en que llevó mas lejos que » Quéria decidirlo todo, todo arreglarlo, y pronunciar
todos los demas la obstinación, la severidad, y el »sobre todo; cada uno proponia imperiosamente su
espíritu turbulento t., p. 91, nota. Bellas cualida » opinion por ley suprema á todos los demas; no era
des para un apóstol! El mismo conoció que el poder »este el medio de vivir en paz. Calvino tenia todo el
que se habia abrogado era ecsorbitante; pues que » orgullo del genio que conoce su superioridad, y que
antes de morir aconsejó al clero de Ginebra, que no » se indigna cuando se la disputa. Qué hombre hubo
nombrara sucesor. Spon. Hist. de Ginebra, t. 2, p. 3, »jamás mas lajante, mas imperioso, mas decidido y
Los protestantes que no cesan de declamar contra la » divinamente infalible segun su voluntad? La menor
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»objecion que se le hacia era siempre una obra de una grande potencia, y cuya confederacion general
»Satanás, un crímen digno del fuego. No fué solo á nada perjudicaba á la independencia de cada uno en
»Servet á quien costó la vida el haber osado pensar particular.
» de diferente modo. -
«Hé aqui cómo se estableció la reforma evangélica
» La mayor parte de sus compañeros se encontra y cómo debe conservarse. Es verdad que la doctrina
»ban en el mismo caso; todos eran tanto mas culpa del mayor número puede ser propuesta á todos como
»bles cuanto mas inconsecuentes: su dura ortodoxia la mas probable y autorizada. El soberano hasta pue
»era en sí misma una heregía, segun sus principios.» de redactarla en fórmula, y prescribirla á los que en—
Deuacieme lettre ecrite de la Montagne, p. 9, 50, 58. carga el enseñarla, porque es indispensable cierto or
* , J. J. Rousseau se valia del espíritu de la pre den y regla en las instrucciones públicas, y en el fon
tendida reforma para justificar su deismo y confundir do no se perjudica con esto la libertad de nadie, pues
á los ministros de Ginebra. (Deuacieme lettre ecrite de que ninguno está obligado á enseñarla á pesar suyo;
la Montagne). tampoco se sigue de aqui que los particulares esién
«Cuál es la religion del Estado, les dice? Es la san obligados á admitir precisamente las interpretaciones
ta reforma evangélica? Hé aquí seguramente unas que se les dán, y la doctrina que se los enseña. Cada
palabras bien retumbantes. Mas cuál es en el dia en uno es juez por sí mismo, y no reconoce en esto mas
Ginebra la santa reforma evangélica? Acaso lo sabeis autoridad que la suya propía. Las buenas instruccio
vos, amigo? Os felicito en este caso. Por lo que á mí nes deben fijar menos la ¿ que debamos hacer,
toca, lo ignoro. Creia saberlo antes; pero me enga ¿ ponernos en estado de elegir bien. Tal es el ver—
ñaba asi como otros muchos mas sabios que yo en adero espíritu de la reforma, tal es su verdadero
cualquier otro asunto, y no menos ignorantes que yo, fundamento. La razon particular es la que decide de
respecto del presente. duciendo la fé de la regla comun que establece, á sa
«Cuando los reformadores se separaron de la Igle ber, el Evangelio; y de tal modo es de esencia de la
sia romana, la acusaron de error, y para corregirle razon el ser libre, que aun cuando quisiera sujetarse
en su origen, dieron á la Escritura oiro sentido que á la autoridad, no dependería de ella el no hacerlo.
el que aquella la daba... Se les preguntó de qué au Por poco que ataqueis á este principio todo el evange
toridad estaban revestidos para apartarse de esta lismo se hunde al momento. Que se me pruebe en el
suerte de la doctrina recibida. A esto respondieron dia que en materia de fé estoy obligado á someterme
que por autoridad , que por la de su razon de á las decisiones de cualquiera, y desde mañana me
cian que el sentido de la Biblia era inteligible y claro hago católico; y todo hombre consecuente y veraz se
á todos los hombres; por lo que concierne á su salva guiria mi ejemplo.
cion, cada uno era juez competente de la doctrina, y «Asi, la libre interpretacion de la Escritura lleva
podia interpretar la Biblia, que es la regla de la mis consigo, no solo el derecho de esplicar sus pasages
ma, segun su espíritu privado; que de esta suerte cada uno segun su sentido particular, sino el de per
todos estaban de acuerdo en lo mas esencial, y que manecer en la duda en los que se encuentran dudosos,
en aquellas cosas en que no p0dian convenir, no lo y el de no comprender los que sean incomprensibles.
estaban. -
Hé aqui el derecho de todos los fieles, derecho sobre
«llé aquí, pues, el espíritu privado, establecido el cual nada tienen que ver ni los pastores ni los ma
por único intérprete de la Escritura: hé aquí la auto gistrados. Con lal que se respele toda la Biblia y que
ridad de la Iglesia repudiada; cada uno pone la doc se convenga en todos los puntos capitales, se vive se
trina bajo su propia jurisdicion. Tales son los dos gun la reforma evangélica. El juramento de los ciu
puntos fundamentales de la reforma. Reconocer la dadanos de Ginebra no recae mas que sobre esto.»
Biblia como regla de su creencia, y no admitir otro «Ahora bien, ya veo á vuestros doctores triunfar
intérprete del sentido de la Biblia mas que á sí mis sobre estos "; capitales, y pretender que yo me
mo. Estos dos puntos combinados forman el principio. separo de ellos. Poco á poco, señores, oido suplico;
sobre el cual los cristianos reformados se separaron no se trata de mí sino de vosotros: sepamos primero
de la Iglesia romana, y no podian hacer menos á lo cuáles son, segun vosotros, esos puntos capitales, se
caer en una contradiccion; porque, qué autoridad pamos con qué derecho me obligaría á verlos en donde
interpretativa hubieran podido reservarse, despues yo no los veo, y acaso en donde vosotros mismos no
de haber desechado la del cuerpo de la Iglesia? los veis. No olvideis, si os place, que al darme vues—
«Mas, se dirá, cómo bajo un principio semejante tras decisiones como leyes os separais de la santa re
pudieron reunirse los reformados? ¿Cómo pensando forma evangélica, y minais sus mas verdaderos fun
cada uno de diferente manera han formado un cuer— damentos: vosotros sois los que segun la ley mereceis
po contra la Iglesia católica? Asi debió suceder; todos el castigo.»
convenian en reconocer en cada uno un juez compe «La religion protestante es tolerante por principios,
tente para sí mismo; toleraban y debian tolerar todas es esencialmente tolerante; lo es tanto como puede
las interpretaciones fuera de una, á saber, la que qui serlo, pues que el único dogma que no tolera es el de
taba la libertad de hacer interpretaciones. Así, la úni la intolerancia. Hé aqui la barrera insuperable que
ca interpretacion que rechazaban era la de los católi nos separa de los católicos, y que reune á las demas
cos. Debian, pues, proscribir todos á la vez á Roma comuniones entre sí: cada una considera á las demas
solo, que los proscribia tambien á todos. La diversidad en el error; pero ninguna mira ó no debe mirar este
misma de sus maneras de pensar respecto de todo error como un obstáculo para la salvacion.»
lo demas, era el único lazo comun que les unia. Eran «Los reformados de nuestra época, por lo menos
como otros tantos estados pequeños, ligados contra los ministros, no conocen ó no aman ya su religion.
 CAL *
291) CAI.
Si la hubieran conocido y amado, al publicar mi libro el suyo; encantados todos de la sabiduria de su com
hubiesen dado de concierto un grito de alegria, todos pañero, y principalmente de su lógica, admiten su
se hubieran unido á mí que no atacaba mas que á sus docta obra, y le dan las gracias por medio de una di
adversarios; pero mas quieren abandonar su propia putacion. En verdad que vuestros ministros no dejan
causa, que sostener la mia; con su tono visiblemente de ser unas gentes particulares! No se sabe lo que
arrogante, con su rabia de embrollos y de intoleran creer, ni lo que dejar de creer; ni aun se llega á com
cia, no saben ya lo que creen, ni lo que quieren, ni lo prender lo que quieren aparentar que creen. La sola
ue dicen. No los tengo sino por unos malos criados manera de establecer su fé, es alacar la de los demas...
el sacerdocio, que lo sirven menos por amor á ellos, En lugar de esplicarse sobre la doctrina que se les im
que por el odio que me tienen. Cuando hayan dispu puta, creen desquitarse respecto de las demas igle
tado, reñido, ergotizado y hablado mucho, en lo me sias buscando querellas á su propio defensor, quieren
jor de su triunfo, el clero romano que conserva su rito probar por su ingratidud que no tienen necesidad de
y les deja hacer, vendrá á destruirlos, armado con ar mis ausilios, y piensan aparecer bastante ortodoxos
gumentos adhóminem sin réplica, y batiéndolos con presentándose como perseguidores.
sus propias armas les dirá: Todo esto va bien, pero «Concluyo de todo esto que no es facil decir en qué
ahora quitaos de enmedio, malvados intrusos, no ha consiste en Ginebra en el dia la santa reforma. Todo
beis trabajado mas que para nosotros; volvamos á lo mas que puede decirse acerca del particular, es
nuestro asunto. que debe consistir principalmente en desechar los
«La Iglesia de Ginebra no tiene ni debe tener co— puntos disputados á la Iglesia romana por los prime
mo reformada ninguna profesion de fé precisa arti ros reformadores y sobre todo por Calvino. Este es el
culada y comun á todos sus miembros. Si quisieran espíritu de vuestra institucion; por esto sois un pue
tener una, en esto mismo se lastimaria la libertad blo libre, y solo en este sentido es como la religion
evangélica, se renunciaria al principio de la reforma, forma en vosotros parte de la ley del Estado l.
y se violaria la ley del Estado. Todas las iglesias pro Por otra parte es indispensable que un protestante
testantes que redactaron fórmulas de profesion de fé, tenga elentendimiento estrañamente preocupado, pa
todos los sínodos, que determinaron puntos de doc ra imaginarse que la Sagrada Escritura es la regla
trina, no quisieron mas que prescribir á los pastores de su fé. Antes de leer ese libro, un joven calvinista
la que debian enseñar, y esto era bueno y convenien se halla ya prevenido respecto de los dogmas que de
te. Mas si estas Iglesias y sínodos pretendian hacer be encontrar en él por las lecciones de su catecismo,
mas con estas fórmulas, y prescribir á los fieles lo que por las instrucciones de sus ministros, por el tono ge
debian creer; en este caso con tales decisiones, estas neral de la secta; tal es la inspiracion que le guia en
asambleas no probaron otra cosa, sino que ignoraban esta lectura. Asi es que un luterano jamás deja de ver
su propia religion». en la Escritura las opiniones de Lutero, un socinia
«La Iglesia de Ginebra parecia mucho tiempo há asi no las de Socino, un anglicano las de los episcopales.
que se separaba menos que las demas del verdadero como un calvinista las de Calvino.
espíritu del cristianismo, y por esta engañosa aparien Este vicio original del calvinismo es suficiente para
cia honraba ya á sus pastores con elogios de que les demostrar lo absurdo de tal sistema.
creia dignos; porque mi intencion no era seguramente No sabemos lo que hubieran podido contestar Cal
engañar al público. Mas quién ve en el dia á esos mi vino y sus compañeros, si un católico instruido les
nistros en oiro tiempo tan poco escrupulosos y hechos hubiera hablado de esta manera: vosotros pretendeís
repentinamente tan rígidos, burlarse de la ortodoxia ser suscitados por Dios para reformar la Iglesia; pero
de un seglar, y dejar la suya en una incertidumbre no sois enviados ni por ningun pastor legítimo, ní por
tan escandalosa? Se les pregunta siJesucristo es Dios, ninguna Iglesia cristiana; por lo tanto es necesario
y no se atreven á responder; se les pregunta qué mis que tengais una mision estraordinaria y milagrosa.
ierios admiten y tampoco responden. ¿Sobre qué Empezad por probarla de la misma manera que Moi
pues responderán, y cuáles serán los artículos funda sés, Jesucristo y los apóstoles probaron la suya. Lu
mentales diferentes de los mios, sobre los que quieren tero y otros se tenian por reformadores como voso
que se decida sino estan comprendidos en los dichos? tros; no estais de acuerdo con ellos, no enseñais en
«Un filósofo echa una ojeada rápida sobre ellos; los todo la misma doctrina; os condenais los unos á los
penetra; los ve arrianos, socinianos; lo dice creyendo otros. ¿A cuál debo yo creer con preferencia? Me dais
honrarlos; pero no considera que espone su interés la Sagrada Escritura por única regla de mi fé; pero no
temporal, única cosa que en general decide aqui abajo reconoceis como Sagrada, Escritura muchos libros
de la fé de los hombres». que la Iglesia católica me desigua como tales; ¿cómo
«Al momento, alarmados y aterrados, se reunen, terminaremos esta disputa? Será la Escritura Santa
discuten y se ajitan, no saben á qué santo encomen la que me enseñe si tal libro es ó no canónico? Me
darse, y despues á fuerza de consultas, de delibera presentais una traduccion francesa de la Biblia. Dad
ciones y conferencias, todo se reduce á un lenguage me una garantia de la fidelidad de vuestra traduccion,
confuso en el que no se dice ni si, ni no, tan dificil de de la cual no estoy en estado de juzgar por mí mismo.
comprender como los dos abogados de Rabelair. La Me decís que no debo deferir á la autoridad de los
doctrina ortodoxa no es bien clara y no se encuentra hombres. Luego debo rehusar la vuestra en todo lo
en manos seguras? que tengais á bien afirmar.
«No obstante, porque uno de ellos compilando á Pues qué la Escritura Santa es la única regla de
fuerza de chistes escolásticos tan benignos como ele mi fé? teneis razon en predicar y querer esplicar la
gantes, para juzgar mi cristianismo, no temióabjurar Escritura: yo sé leer tan bien como vosotros; á mí me
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toca buscar alli lo que Dios ha revelado, y no á vos sado de Suiza por haberse reido del fatum paganó,
otros el demostrármelo. Me prometeis la inspiracion Gentilis, que se atrevió á decir: «Ese Dios no es el del
del Espíritu Santo para conocer el verdadero sentido Evangelio», no tuvo mas tiempo que para huir por
de la Escritura y yo la acepto: esta inspiracion me temor de caer en las manos del verdugo. Qué páginas
dicta que vosotros predicais el error, y que la Iglesia tan bellas no ha escrito Beza para sostener que la
católica enseña la verdad. predestinacion es un dogma, en el cual es indispensa
Por toda respuesta, Calvino hubiera opinado que ble creer sopena de incurrir en la condenacion eter
mar á este razonador: «Semejantes monstruos, decia, na! ¡Llamaba infames á los que osaban negarlo.
debian ser ahogados como yo hice con Miguel Servet, Juan Weber no temió á los anatemas del discípulo
español». Carta de Calvino á Mr. Poet. de Calvino. Atacó la predestinacion en términos lle
* Terminaremos este artículo esponiendo con nos de acritud, quizá como mal cristiano, pero segu—
Mr. Audin (Historia de la vida, de las obras y de las ramente como escelente teólogo. Hasta en vida de
dóctrinas de Calvino. t. 2, p. 486), cuáles son los re Calvino prohibian los berneses, bajo penas severas el
sultados de la influencia ejercida por Calvino. predicarsus doctrinas sobre la gracia, y el universalis
«Si Ginebra, antes de 1595, se hallaba sumida en mo de Bullinger minaba por su base el particularis
las tinieblas de la supersticion, ¿con qué verdades mo del reformador.... Mostradnos, pues, la ilustra
pudo ilustrarla Calvino? Veamos la antorcha con que cion de ¿ Ginebra es deudora á Calvino
vino á alumbrará ese pueblo decaido. Mas quién nos «Resplandece acaso en esa justificacion sin obras,
guiará? Nuestros compañeros de la reforma rechaza ¿ Melanchthon defendió primero, y que abandonó
rían el testimonio de escritores católicos; pues bien, espues con grande escándalo de toda escuela re
apelemos al protestantismo». formada? ó en la confesion de fé impuesta á los gine
«El libro de oro de Calvino es su iustitucion cris brinos, y en la que los calvinistas quieren encontrar
tiana: abrámosle pues». toda la dogmática contenida en la Exomologesis de
«Y qué decir desde luego de ese simbolismo trini Augsburgo, engaño, que el pseudómino Andrés An
tario que el reformador quiere imponer á su co ti Krell ha puesto en evidencia en su sábia diser
munion? Gentilis lo rechazó abiertamente, pero Gen tacion que conmovió al mundo Sajon en el siglo XVI?
tilis es recusado por Beza y Drelincourt. Mas hé aqui «Si la Trinidad cuaternaria, si la Eucaristia sin fi
que llega Hennio, ese puro discípulo del Evangelio, ¿ si el fatalismo pagano de Calvino no son las ver
como se le llama en Silesia. No ha denunciado este á ades de que habla el mármol de palacio, (ya se sabe
Calvino como un doctor que ha judaizado, corrompido que en 1535 Ginebra grabó sobre los muros de su pa
la Biblia, desnaturalizado la palabra de Dios, falsifi lacio los títulos de Calvino como un reconocimiento del
cado los testos escriturarios y blasfemado de la Tri mundo cristiano), en donde encontrarlos en la sim
nidad? Por lo tanto Calvino no enseñó en Ginebra la bólica ginebrina? Estas son las grandes novedades
verdad respecto al dogma de la Trinidad». que Juan Noyon vino á anunciar segun dicen sus
sYa conocemos su mito eucarístico, en el que no panegiristas. Todavia podia disputársele su inven
»ha podido el catolicismo hallar ni cuerpo ni alma ni cion, y como los predicadores de Lausana, dar el ho
»idealismo, ni realidad: esta es su gloria en la escue nor del sistema predeslinatario á Zuinglio y OEco
»la ginebrina: Prosignió su triunfo con una perseve lampadio; pero no les disputamos que les pertenez—
»rante obstinacion, y los luteranos han tratado á su can; nosotros tan solo tratamos de establecer, apo
» sistema cínico peor todavia que los católicos. El yándonos en testimonios irrecusables, que cada una
»prolestante que le atacó mas vivamente no es una de estas neologias es una mentira que el espíritu de
»inteligencia obscura: es un humanista que á los Dios no pudo inspirar. Si esta decision ha sído dada
»veinte años leia en esa cátedra de Wuttemberg que por la boca de un reformador, en qué viene á parar esa
»Melanchthon habia ocupado tan dignamente; que á corona que despues de tres siglos de verdadera com
»los veinte y cuatro era principal del colegio de Eis pañía de los pastores, de la cual forma parte un anti
»leben, en donde nació Lutero, á los treinta y tres irinitario, ha querido poner sobre la frente de Cal
»decano general de Mansfeld, á los treinla y cinco Vin0?
» profesor de teología de Jena; por último, Gaawer que «Si hay un hecho histórico irrevocable, es que el
» se acogió á la metonimia de Calvino, como Marlin á apostolado de Calvino fue fatal á las costumbres de
»los monges de Colonia, hundió dicho sistema al com la república.
«pás de los aplausos de sus correligionarios. Ningun sin duda, dice Mr. Galiffe, Notic. Gén t. 3,
» dominico de Leipsick habló jamás de Hutten con lan »los antiguos ginebrinos no eran ángeles de pureza
»ta irreverencia como Grawer de Calvino. ¿Creeríais »celestial, pero al menos no eran hipócritas. No iban
» que encabezaba uno de sus libros con este título ver »á profanar el templo con demostraciones de una pie
¿ intraducible: Absurda, absurdorum, » dad ecsaltada cuando acababan de esponer el fruto
» absurdissima calvinística absurda? y el folleto ob » de su libertinage. Eran vivos en sus enemistades;
»tuvo un gran suceso.... Grawer os dice que la me » pero no eran testigos falsos, espías y delatores. Te
»tonimia de Calvino es un absurdo Pelisson el cató »nian necesidad de indulgencia, pero no carecian de
»lico estuvo mas político». - »ella estos mismos, y no trataban de ocultar su fragi
A los ojos del reformador, el sistema sobre la pre »lidad natural bajo los juicios crueles de una severi
destinación es una revelacion celestial. En Ginebra, »dad humana. Eran lo mismo que fueron en el si
hablar , mal de ese Dios aristócrata que da y salva »glo XVIII, cuando el calvinismo se reducia entre
segun le agrada, es un crimen que se castiga con el » nosotros á una balada del tiempo antiguo, hombres
destierro y á veces con la muerte. Bolser fué espul »altivos, osados, independientes, buenos amigos
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»enemigos irascibles, pero fáciles de reconciliar, ca no quiso descen ler de los cielos, entregó la palabra
»ritativos y decididos, buenos patriotas sobre todo por de Calvino á las disputas de sus sucesores en el m.
»que tenian una patria á quien podian amar.» A la nisterio. Entonces esta palabra, que paraser verda -
antigua sangre ginebrina pura, portanto tiempo, mez dera hubiera debido revestirse de la inmutabilidad,
cló Calvino la sangre de los refugiados, su guardia fue cruelmente despedazada. Si habeis visto en La
retoriana; estafadores, bribones, hombres que ha Haya el cadáver pintado por Bembrandt, podeis for
¿ quebrado en su oficio se sentaban en el consis maros una idea de la operacion que sufrió la doctri
torio, entraban en los consejos y eran nombrados na calvinista fuera de Ginebra. Los operarios toma —
ciudadanos, y en cambio de tantos honores daban es ron diversos nombres, segun atacaban un sistema en
cándalos de que apenas tenia una idea la ciudad. To su esencia ó en sus partes; hubo, pues, particularistas
do el tiempo de la dominacion del teócrata fue el es y universalistas. El escalpelo no solo heria carnes
ionage una dignidad lucrativa. Que ojee el moralista muerlas; cortado en forma de pluma derramaba á
archivos del gobierno Mr. Galife le acompañará nombre de la gracia divina, cuya naturaleza queria
para manifestarle los registros cubiertos de inscrip dará conocer, la tinta y la injuria de tal suerte, que
ciones de hijos lejítimos, que se esponian en el puen á los calvinistas les dió la idea el mejor dia de concluir
te de Arve; testamentos, en que la voz moribunda de on todas esas disputas que alteraban el sosiego de
un padre acusa á sus hijos de crímenes abominables; los ciudadanos y daban que reir á los católicos; pero
actos autorizados por notarios, en que una madre esta risa era contagiosa.
constituye un dote para los bastardos de su hija; casa La palabra de Calvino, al llegar á los Paises Bajos,
mientos en que el esposo pasa desde el altará la cár— y sujeta á un examen, se juzgó insuficiente, loca y
cel; mugeres de todas clases que ponian sus hijos re peligrosa. Cada ciudad de Holanda tenia un aposto
cien nacidos en el hospital para vivir en la abundancia enviado de Dios, un Pablo ó un Juan Bautista. De to.
con un segundo marido. Esperemos un poco; el puri dos los libros de Calvino, el único que se conside
tano reformado, que ha pasado su vida entre el polvo raba como la obra del Señor, era el tratado De pu.
de los archivos, ábrirá bien pronto la mano (lo pro niendis haereticis, que cada secta traducia para ser
mete al menos) y entonces caerá de las hojas escritas virse de él contra los disidentes. Bogermann, profesor
en una lengua muerta, porque teme avergonzar al en Francker, comentó el folleto y añadió nuevos tes.
pudor, y referirá en el idioma de Petronco los convi tos para probar que el poder civil tiene el derecho de
tes de confianza de los ministros ginebrinos. Beau muerte sobre el blasfemador del nombre de Dios. Lla
doin nos cuenta ya una de esas comidas nocturnas en maba blasfemador al que no pensaba como él sobre
las que Beza era el dueño de la casa; pero no se ha la gracia. Jacobo Arminio y Franz-Gomar renova
querido dar crédito á su narracion. M. Galiffe, que ron las disputas de Lutero y Carlostadio, Franz-Go
quiere morir en el protestantismo, será creido al me mar condenaba á Arminio que sostenia la libertad
nos Ved cómo rechaza ya con toda la energía de su del yo; Arminio destinaba á las llamas á Gomar, que
alma toda comunion con esa reforma mezquina bas— redicaba el siervo albedrio. Hubo tolerantes é into
tarda éintolerante que Calvino quiso imponer á sus erantes calvinistas rigidos y moderados, lapsarios y
conciudadanos. supralapsarios. No habian pasado quince años y hu.
Gracias á sus investigaciones algunos nombres ca biera podido escribirse en una uña iodo lo que que
tólicos, y entre otros el de Bolsec, fue honrosamente daba de esa neologia que se habia coronado. «Toda
rehabilitado. El viejo atleta de la verdad histórica, obra divina, ha dicho Claudio, es por su naturaleza
que mereció el elogio del lord Brougham, no se dejará inmutable; solo la obra humana es la que cambia de
espantar con los clamores de algunos calvinólatras forma y color». La palabra de Calvino no era, pues,
que en el dia quisieran hacernos creer en la accion una palabra de verdad. Y cosa bien notable por cier
civilizadora del reformador. Si necesario fuese abri to; en esas palingenesias doctrinales jamás abando
ría los libros del autor del Tratado de los escándalos, na el fiel una opinion que se le da como una verdad;
y leeria en él esta confesion escapada de la boca de de manera que si hay una apostasia nueva, podeis
Calvino: «Hay una llaga moral mas deplorable toda estar seguros de que sale del santuario. ¿Y cómo con
»via; nuestros pastores, que suben á la cátedrasagra tener ese desórden intelectual? Cuando el soplo de
»da de Cristo y que debian edificar las almas por una boca humana se hace quisquilloso, colérico y desor
» pureza superabundante de buenas costumbres, es denado, el poder interviene y hace el oficio de sacer
»candalizan la Iglesia del Señor con sus desórdenes: dote; y si se encuentra un consejo como el de los Dos
» miserables histriones que se admiran de que su pa— cientos que dice á sus ovejas: Basta de disputas la
»labra no tenga mas autoridad que si fuera una fábu predestinacion calvinista es una virtud evangélica:
»la representada en público, d que el pueblo los se un príncipe al luterano: «Tú crees en la presencia
»ñale con el dedo y se mofe de ellos. Lo que á mí me real; al calvinista: «tu no admites mas que un sim
»sorprende es la paciencia de las mugeres y de los bolo vivificante; hé aquí la mesa; ven á comulgar»; y
»niños que no los cubren de lodo y de inmundicias.» en el ministerio de Berlin, un eclesiástico á sueldo del
Calvino mismo antes de morir, habia previsto, lo monarca escribirá y jurará, segun la necesidad, que
mismo que Lutero, el destino de la palabra que anun en el dia no existen ya ni el calvinista ni el lue
ció á los hombres. «El porvenir me horroriza, decia, rano, que no hay mas que cristianos evangélicos.
no me atrevo á pensar en él; porque, á menos que el «Durante la última mitad del siglo XVI, dice un
Señor no descienda de los cielos, la barbarie va á tra
panegirista de Calvino, los herederos del legislador
garnos. Ah! plegue á Dios que nuestros hijos no me de la reforma, sin tener su poder ni su genio, adop
tengan como un profeta». Era profeta. El Señor que taron su dogmatismo y su inflexible terquedad: de
TOMO l. 3
 CAL 29 CAL

claraban que ninguno era cristiano sí no pensaba co se llama en Ginebra ministro de Dios, pidió el des
mo Calvino: miraban como una impiedad la inves tierro de Gentilis, el encarcelamiento de Ami Per
tigacion de la verdad religiosa no hecha segun los rin, la sangre de Gruel, de Berlhelier y de Servet,
principios del maestro, y por la estrechez de estas el poder comerciante no lo concedió todo sin murmu
miras fue preciso destruir toda la obra de la refor— rar y sin remordimientos.
ma en Ginebra.» Libertad civil y religiosa, nacionalidad, poesia,
Siglo y medio despues de Calvino reinaba toda pintura, bellas letras, todo lo lastimó, desfiguró y
vía este dogmalismo. La academia fundada por el sofocó Calvino en Ginebra. Sin él esta ciudad ha
reformador se habia transfigurado en concilio ecumé bria marchado como las demas á la par de Roma,
nico, qne teniendo á la vista la confesion escrita de Florencia y Venecia en el camino de la ilustracion;
Juan de Noyon, aprisionaba, desterraba, y conde el ginebrino podia ser pintor, poeta, orador, artis
naba á pan y agua á todo innovador bastante atre ta. No creemos en lo que nos dice la reforma, que no
vido para oponerse á su enseñanza. Si llegaba de ha nacido para la cultura de las artes: es una cálum -
Francia alguna alta inteligencia para estudiar la nia. Era preciso absolver al hombre que cambió
simbólica nueva, se le presentaba el libro de oro del las naturalezas mas floridas en teologastros del Bajo
maestro y era preciso que le reverenciase como un Imperio. Y aun si estos teólogos descendientes de
Evangelio traido del cielo. La hospitalidad se da Calvino se asemejáran á aquellos escolásticos del re
ba á este precio. Simonio, despues de haber aproxi nacimiento, tan desacreditados, que nos divierten
mado á sus lábios esta exomologesis, se levantó, se muchas veces con sus inocentadas!... Los religiosos de
puso á meditar, y manifestó algunas dudas; se le Ginebra son pedantes y fastidiosos... Producen vo
encarcelo y se le desterró. A veces, al salir del tem— lúmenes sin estilo y sin vida. Calvino ni aun les de
lo un cristiano, asaltado de las dudas, va á mani jó la eleccion de la materia: no tienen mas que un
estar el estado de su conciencia á un ministro: el mi círculo. Los desgraciados giran, incesantemente al
nistro es inflexible, el cristiano es castigado y encar rededor de la gracia, del libre albedrio y de la pre
celado. Es necesario creer en Calvino para salvarse. destinacion. Mientras que la ciudad se cansa de es—
Confesamos que M. Gaberel encontró palabras no ta suerte en el vacío, Roma produce, al soplo vivi
bles para lastimar ese dogmatismo embrollon, lega ficador del papado, obras maestras de historia, de
do de Calvino, y que segun la bella espresion de exegesis, de lengüistica y de filosofía. Nos equivoca
M. Guizot, quiere aprisionar la conciencia en las mos; Ginebra tiene la pretension de estar asociada
consecuencias de un argumento. Mas M. Gaberel hu al movimiento universal de los ingenios; he aqui
biera debido saber que la simbólica calviniana no los nombres de algunos de los diamantes de su co
podia vivir sino con el poder. Que el brazo de car rona literaria: los teólogos Fhagaut, Perrot, La-Zaye,
ne se retire, y la obra de Juan de Noyon morirá en el filósofo Portus, el poeta latino Beaulien, el polí
medio de las convulsiones de la anarquía; véase sino grafo Goulard, el humanista Sarracin. -

despues, cuándo el pensamiento, gracias á los es— En Wutemberg, asi como en Ginebra, la refor
fuerzos del sínodo de Dordrecht, puede escudriñar ma, que jamás comprendió los instintos populares,
la confesion ginebrina, cómo todos los dias quita rompió todas las imágenes materiales del culto: pe
uno de los artículos del formulario, hasta el punto ro en Wutemberg, una vez enseñoreada del templo
que de todas las ciudades reformadas, Ginebra es la católico, se puso á levantar las estátuas, á restaurar
menos calvinista. Y entonces, triunfante el libre los cuadros y á componer las vidrieras temiendo ser
examen, sucede que un ministro que ha negado la acusada de vandalismo. En Ginebra, para dar gusto
Trinidad puede sentarse impunemente sobre el á Calvino, hizo pintar las paredes de la catedral,
banco que ocupó durante veinte años el que hizo vendió las estátuas é hizo quemar los cuadros.
morir á Servel, el antitrinitario. Calvino jamás ¿? el arle. En vano bus
Aunque la reforma se oculte bajo el manto de careis en todos sus escritos una lágrima de poesia.
Zuinglio, de Lutero, de Calvino, de OEcolampa— Es verdad que en algun tiempo ensayó el hacer ver
deo ó de Knot, no puede ecsistir dogmáticamente mas sos latinos, pero qué versos legó sus tendencias
que segun la voluntad de los príncipes: su reino prosáicas á su nueva patria. Si Ginebra hubiera per
es de este mundo. Seguidla al través de Alemania, manecido fiel al catolicismo, qué brillante puesto no
cuando partió de Wutemberg: en cualquiera parte ocuparia en el dia en la historia literaria! . En el si
que quiera establecerse tendrá necesidad de la glo XVI contínuamente estaba recibiendo las visitas
mano del hombre. Sobre qué puede, pues, apoyarse de numerosos italianos. No parece natural que estas
cuando ha destruido los recuerdos, la creencia, la imaginaciones meridionales, tan apasionadas por las
fé y las tradiciones? Estando apagada en ella toda formas, debian despertar á las orillas del Leman
vida ideal, se materializa entonces y toma cuerpo y el culto de las musas? Pero en el momento en que
alma: en Inglaterra ejerce una mujer las funciones tocaban las riberas del lago, , cesaban por sí mis
del papa : en Prusia arregla un monarca hasta la mas de cantar. La atmósfera de teología que fluctua
disciplina eclesiástica, y coordina las liturgias para por todas partes, hasta el interior de las familias,
las dos comuniones reunidas. (Véase lgLESIA EvANGE— ahoga en sí todos los gérmenes poéticos que aporta
Llca CRISTIANA); en Ginebra los seglares se ven trans ron de Roma ó de Florencia. Por necesidad tienen
formados en directores de Israel. No existe pais en que ponerse á disputar. Se mezclan las dos sangres,
el mundo en donde sea mas ciega la fé en el poderque sangre pesada y espesa que no pueden vivificar, ni
en Prusia; esta tierra en que florece el luteranismo. las armonías del mundo musical, ni las fantasías
Ya habeis debido ver que cuando el teócrata, que del mundo ideal, ni las maravillas del mundo mate
 CAM 203 CAM
rial. Antes de morir legó Calvino á su pais de adop tado y dormido en una postura indecente, se mofó de
cion una manía de controversia que los refugiados se él, y fue maldecido en su posteridad por esta insolen
vieron obligados á sufrir. Nacionales y estrangeros cia. Tuvo muchos hijos y nietos que poblaron el
gastan su inteligencia en la investigacion de pro Africa. Se cree que él permaneció en Egipto; pero no
blemas antológicos, tan oscuros como esas especu— es cierto que los sybios tuviesen intencion de adorarle
laciones escolásticas que tanto se vituperaban á los bajo el nombre de Júpiter-Ammon, como han crei
religiosos de la edad media. Estos problemas se agi do muchos mitólogos. Mas bien pudiera suceder que
tan en el colegio, en el consistorio y en las casas par este dios fuese á la manera del de los griegos, que su
ticulares. Ginebra, rodeada de tesoros antiguos, no se nombre sea el de Júpiter Arenoso, ó que preside á las
atreve á tocar á ellos. Todos los manantiales de arenas de la Lybia. -

emociones, intelectuales fueron agotados por Calvi Algunos críticos de la Escritura Santa dicen que
no. Prohibe al alma ocuparse de la forma visible, Moisés forjó la historia de la maldicion de Cam, para
porque podria caer en la idolatría: de la pintura pa autorizará los israelitas á que se apoderasen del pais
ra que no despierte en ella ideas falsas sobre la de los cananeos: pero Moisés no funda el derecho de
naturaleza divina; de la música porque la sumergi esta conquista sobre la maldicion fulminada contra
ria en sueños voluptuosos. Asi se cumplia la sen Canaam; fúndale sobre la voluntad y promesa de Dios,
tencia formulada por Menzel contra el protestan— ue queria castigar á los cananeos por sus crímenes.
tismo sajon, «La reforma fue al principio un fuego éase CANANEos. Conviene observar, que la predic
devorador; despues una aurora boreal, señal de en cion de Noé se verifica en el dia por la esclavitud del
friamiento.» Egipto bajo soberanos estrangeros, y por la servidum
La misma escuela exegética que Calvino creó en bre de los negros. Las palabras de Noé son una pro
Ginebra produjo una reaccion funesta sobre la cultu fecía, y no una imprecacion. V. IMPRECACION.
ra de los talentos. En la prevision de hostilidades por
parte del catolicismo, la reforma habia continuado sus Camaldulas. Orden religioso fundado por san
mezquinas colaciones del testo bíblico. Este trabajo Romualdo en 1009, ó segun otros, en 960. S. Romual
de palabras no se habia hecho para enardecer la do envió á muchos de sus religiosos á predicar el
imaginacion. En los libros santos no se estudiaba, ni Evangelio á los pueblos de la Hungría, que eran to—
la imágen, ni el tropo, ni la inspiracion; se dejaba davia infieles; él mismo iba con este designio piadoso
el oro por el plomo. Es necesario ver cómo se gozan cuando le sorprendió la enfermedad de que murió.
esos teólogos cuando han quilado ó añadido un pie El padre Ziegelbaur dió noticia de los escritores de
á una letra griega; anuncian esta buena fortuna, esta Orden en 1750 en una obra impresa en Venecia,
como nosotros los católicos, cuando en Roma Ra en folio.
fael pintó el cuadro de la transfiguracion, ó cuando La congregacion de los ermitaños de S. Romual—
Erasmo en Basilea acabó el prefacio de su S. Geró— do, ó del monte de la Corona, es una rama de la de Ca
nimo. No pidais á todas esas inteligencias de los si maldoli, á la que se unió en 1532. Pablo Justiniani,
glos XVI y XVII, procedentes de Calvino, ningunos de Venecia, empezó su establecimiento en 1520, y
descubrimientos históricos, científicos ó morales: fundó su principal monasterio en el Apenino, en el
creen haber cumplido con su tarea, despues de em sitio llamado el monte de la Corona, á diez millas
borronar algunas hojas de papel de glosas escritura de Penusa. Véase á Baronio, Rainaldi, Spondo, ad
anno 1520.
rias, cuya idea es tan bárbara como las palabras. Es
ta ciudad, que se gloría de haber recibido en 1535 el Los protestantes inventaron una calumnia grosera
contra S. Romualdo. En una historia eclesiástica im
don de la fé, no posee aun ni un solo libro ascético
de algun valor. Despues de prolijas investigaciones, ¿ en Berna en 1767, se dice que Sergio su padre,
Lerelier no ha encontrado dignos de ser citados en abiéndose hecho monge y queriéndo abandonár es
este género mas que el Mellificum simboli apostó te estado por haberse disgustado de él, Romualdo
lici circa incarnationem, la apertura de los sellos del acudió al monasterio, puso grillos á su padre, y no
Apocalipsis de S. Juan, y la espada del gigante Go dejó de castigarle hasta que promelió perseverar en
liath. Aun en el dia, tal es la pobreza parenética á que el estado monástico. Fábula absurda si las hay. To—
la ha reducido Calvino, que se vé obligada á darnos dos los historiadores convienen en que S. Romual
la roz del pastor de nuestro cura montañés Regis; pero do solo empleó las razones, los ruegos y las lágrimas
quitando todo lo que es de fé, todo lo que habla á la para inclinará su padre á la perseverancia. ¿Cómo se
imaginacion; los capítulos dogmáticos. Y si la divini hubiera atrevido á ejercer una violencia en un mo
dad de Cristo se niega en un libro de uno de los nasterio en donde no tenia ninguna autoridad y en
ministros de la venerable compañia, un metodista, donde no era superior ni religioso? Si él hubiese crei
M. Malon, es el que se atreve á tomar la defensa. do permitida la violencia, la habria hecho ejercer
Todo el mundo sabe que Ginebra, al proclamar por un religioso mas bien que hacerse él mismo cul
que el calvinismo no es el cristianismo, se sustrajo del pable. Toda su vida dió ejemplo de una dulzura y de
yugo doctrinal del reformador. Rehabilitado el libre una paciencia á toda prueba.
examen, se abre otro abismo, la anarquia religiosa, y Los censores del cristianismo preguntan, si para
se oyó una voz que gritaba á sus pastores; «vosotros santificarse es necesario retirarse á los desiertos. No,
habeis renegado de Cristo, y Cristo os reniega.» seguramente, pero este gusto que Dios ha inspirado
Esta voz venia de Escocia. á algunos personages muy virtuosos, no ha sido inútil
al mundo. Han desmontado y hecho habitables luga
Cam. Hijo de Noé, viendo á su padre ébrio acos res que eran salvages; la fama de sus virtudes ha sa-
-
 CAMl 296 CAN,
cado del desórden á hombres que hubieran muerto Mas las hazañas de Camos puestas por Jephté en
impenitentes; la soledad es necesaria para aquellos á futuro contingente, y comparadas á la posesion, real
quienes el mundo es una mansion peligrosa. y actual de los israelitas, nos parecen una burla bas
Mas si todos los hombres fuesen atacados de este tante grande de este falso dios. «Jehovah, continúa
acceso de melancolía, la sociedad se disolveria. No Jephté, juzgará en este dia entre lsrael y los anmoni
lem mos esta desgracia; Dios ha proveido á esto; tas.». No temia, pues, mucho el poder de Camos; efec
no dá el gusto por la soledad mas que á un pequeño tivamente, los añmonitas fueron vencidos por Jephté,
nú ero de hombres, y seria una injusticia quitarles y de esta suerte terminó la disputa.
su inclinacion. De esto mismo resulta que Jepthé habia leido la
historia referida en el capítulo 21 del libro de los Nú—
Cameronianos. En el siglo XVII, se dió este meros; no omite ninguna de sus circunstancias. Este
nombre en Escocia á una secta que tenia por gefe á libro de Moisés existia, pues, entonces, y no es cierto
Arquibaldo Cameron, ministro presbiteriano, de un que el Pentateuco, de que forma parte, fuese escrito
carácter singular; no queria recibir la libertad de en los siglos siguientes y mucho despues de Moisés.
conciencia que Carlos Il rey de Inglaterra concedia á
los presbiterianos; porque segun él, era reconocer la Campanas (Bendicion de las). La Igle
supremacía del rey, y considerarle como gefe de la sia quiere que todo aquello que tiene alguna relacion
Iglesia. En esta estravagancia se reconocia el genio con el culto de Dios sea consagrado por medio de las
característico del calvinismo. Estos seclarios, no con ceremonias; por consiguiente, bendice las campanas
tentos con haber producido un cisma con los demas nuevas, como se presentan en la Iglesia de la misma
presbiterianos, llevaron el fanalismo hasta declarar ásuerte que los niños recien nacidos, se las da un padri
Carlos II inhábil para la corona, y se sublevaron; se no y una madrina, ¿s un nombre y llamán
los redujo con facilidad, y en 1690, en el reinado de dose bautismo esta bendicion.
Guillermo llI, se reunieron á los demas presbiteria Alcuino, discípulo de Beda y preceptor de Carlo
nos. En 1706, comenzaron de nuevo á escitar turbu magno, habla de este uso como anterior al año 770;
lencias en Escocia, se reunieron en gran número y SUl forma se encuentra prescrita en el pontifical ro
tomaron las armas cerca de Edimburgo; pero fueron mano y en los rituales. Despues de muchas oraciones
dispersados por las tropas disciplinadas que se envia dice el sacerdote: «que esta campana sea santificada y
ron en su persecucion. Se cree que tengan mas odio consagrada en el nombre del Padre y del Hijo y del
á los presbiterianos que á los episcopales. Espíritu Santo»: vuelve á recitar algunas oraciones,
Es preciso no confundir el gefe de estos camero lava la eampana por dentro y fuera con agua bendita,
nianos con Juan Cameron, otro calvinista escocés que
hace siete cruces encima con óleo sanlo, y cuatro por
¿ á Francia y enseñó en Sedan, Saumur y Monlau dentro con el santo crisma, la inciensa y la pone nom
an. Este era un hombre muy moderado, que desa bre. Se puede ver esta ceremonia mas por estenso en
probó el fanatismo de los que se sublevaron contra las ceremonias religiosas del abale Banier.
Luis XIII y esperimentó muy malos tratamientos por
su parte. Dejó algunas obras recomendables. Camá. Pueblo ó aldea de Galilea, en la que fue
invitado Jesucristo para unas bodas, é hizo allí el pri
( amos. Dios de los amonitas y de los moabitas. mero de sus milagros cambiando el agua en vino.
Se escribe en hebreo Kamosch ó Kemosch, término Muchos incrédulos han hecho esfuerzos para hacer
bastante aproximado al de Schmesch, el sol; parece que sospechoso este milagro. Dicen que Jesucristo hizo
este astro fue la principal divinidad de los orientales. llenar dos cántaros de agua, mezclando con ella al
Como quiera que seá, Camos ha dado l ar á una gunas drogas para dar al agua el color y gusto del
objecion contra la historia sagrada. Bajo el gobierno vino. Añaden que Jesus favoreció la inlemperancia
de los jueces, los amonitas declararon la guerra á los de los convidados, proporcionándoles vino despues
israellas, pretestando que estos se habian apoderado de estar embriagados.
de una parte del territorío de los amonitas. Jephté, ge Mas si Jesucristo no hizo mas que dar color y gus
fe del pueblo de Dios, les manifestó que esto era fal to al agua, no favoreció, pues, la intemperancia; lue
so, que el terreno ocupado por su plieblo en sus cer go una de estas dos acusaciones destruye la otra. . .
caníás habia sido conquistado á los amorreos que le Desde que la química é historia natural han sido
usurparon en otro tiempo á los moabitas, y que Israel elevadas al mas alto grado, ¿se ha descubierto algu
se encontraba en posesion pacífica de él hacia 300 na droga que tenga, la virtud de dar al agua el color
años. Con efecto, esto es lo que se refiere en el libro
y gusto de un escelente vino? Los judios no eran los
de los Números, c. 21. Jephté añade, segun el testo: mejores químicos, y Jesucristo no habia estudiado ni
«No poseereis el terreno en cuya posesion vendrá en Judea, ni en ninguna otra parte. No tocó á las va
vuestro Dios Camos. Nosotros tambien continuaremos
sijas en que el agua fue convertida en vino; todo pa
poseyendo todo aquello de que Jehovah nuestro Dios só por la mano de los que servian la mesa; S, Juan
nos dió posesion.» Jud, c. 11, y 2. que refiere este milagro fue testigo ocular de él.
Hé aqui, dicen algunos incrédulos, cómo Jephté El amo de la casa despues de haber probado este
pone á Camos al mismo nivel que al Dios de Israel; no vino milagroso dijo al esposo: «Todo hombre sirve
tenia, pues, una idea mas alta del uno que del otro, » primero el buen vino, y despues que han bebido
Jehorah era como Camos un dios local el dios de un »bien, cum inebriati fuerint, entonces dá el que no es
pueblo particular, y no el soberano Señor del univer » tan bueno: mas tú guardaste el buen vino hasta
so; tal era la crecncia de los israelitas. »ahora.» Joan., c. 2, y 10. En el estilo de los escrito
 CAN 297) CAN
res sagrados, inebriari no significa siempre embria tan injusta en cuanto á su forma, como en cuanto á
garse, sino beber mientras hay sed, con abundan su esencia, , porque los israelitas ejercieron en ella
cia. En el sentido figurado significa recibir en abun crueldades inauditas: atribuirlas á una órden espre
dancia bienes ó males. No se debe pues deducir de sa de Dios, y suponer que contribuyera á ellas por
este pasage que Jesucristo favoreciese la intempe sus milagros es blaslemar. Veamos si las declamacio
rancia de los convidados. Véase á Glasii, Philolog. nes que se han hecho con tanta frecuencia acerca de
sacra l. 5, tract. 1, c. 12. -
esto son fundadas.
1." Los israelitas se encontraban bajo el yugo de
Cananea. Muger de las cercanias de Tiro y la necesidad. Se habian visto obligados por la tiranía
de Sidon, que fué á pedir á Jesucristo la curacion de de los egipcios á salir del Egipto; no podian subsistir
su hija atormentada por el demonio. El Salvador pa naturalmente en un desierto inculto y esteril, ni pro
reció rechazarla primero, «Yo no he venido, dice curarse una habitacion, ni tierras que cultivar sino
» sino por las ovejas perdidas de la casa de Israel.... con la espada en la mano y á espensas de sus vecinos.
» no conviene tomar el pan de los niños y arrojarlo De todos los motivos que pueden autorizar una guer
»á los perros». Mat. c. 15, y. 24, 26. Por esta res ra y una conquista, desafiamos á nuestros adversa—
uesta dicen ciertos críticos, que Jesus confirmaba rios á que aleguen uno mas legítimo.
¿ absurda de los judios, que conside— 2.º Las diferentes poblaciones de los cananeos no
raban á los gentiles como animales impuros. poseian la Palestina con un título mas justo que los
Por el contrario, trataha de destruir esta preocu israelitas; en el espacio de cuatrocientos años no ha—
pacion ; les hacia ver que entre los gentiles habia bian cesado de disputarse y arrancarse sus posesiones.
almas mas humildes, dóciles y dignas de sus bene Los amorreos quitaron parte de su terreno á los moa
ficios, que entre ellos mismos. Asi, despues de po bitas; los idumeos cogieron de los horreos el pais de
nerá prueba la confianza de la cananea dice: «mu Seir, y pasaron este pueblo á cuchillo; los Caphtorim
ger, tu fé es grande, cúmplase tu deseo». Al volver esterminaron á los heveos que poseian el canton de
á su casa encontró á su hija con salud perfecta. lasserim hasta Gaza. Los moabitas se apoderaron
Los incrédulos que han querido epilogar este mi— del pais de los Emim y los amonitas del de los zon
lagro, debieran enseñarnos cómo y por qué poder zomim, despues de haber esterminado estas dos na—
Jesucristo curaba los enfermos lejanos, sin mas apa ciones. Núm. c. 21, y 26, Deut. c. 2. Dios queria
rato que pronunciar una palabra. enseñarles que á él le corresponde distribuir los di—
versos paises del mundo á quien le place. Si todos los
Canameo. V. CANANEos. ueblos hubiesen comprendido mejor esta verdad, se
ubiera derramado menos sangre en todos los siglos
Cananeos. Pueblo de la Palestina, descendien posteriores.
te de Canaam nieto de Noé. Los críticos de la histo— 3." Los cananeos fueron agresores respecto de
ria santa han hecho muchas observaciones con este los israelitas; no esperaron ser atacados. Los amale—
motivo. citas, los idumeos, los reyes de Madian de Moab y de
En el Génesis, c. 12, y. 6, se dice, que cuando Arad, los amorreos y los amonitas presentaron el
Abraham fué á la Palestina habitaban, ya en ella los combate á los hebreos. Núm. c. 20, 21 y 22. Es
cananeos c. 13, y .7; el autor añade que cuando los pues se veian obligados á retrocederal desier
Abraham volvió á, Egipto, habia ya en este mismo to, ó pasar por encima de sus enemigos. Los cana
pais cananeos y Pherezeos. Esta observacion, dicen neos poseian mas tierras que las que necesitaban, y
no estaban
nuestros críticos, no pudo hacerse sino por un antor de ellas.
dispuestos á ceder la mas mínima parte
que escribia en un tiempo en que los cananeos no
estaban ya en aquel pais, y de consiguiente despues 4." . Dios no deja ignorar las razones por qué los
de la conquista de la Palestina por los israelitas. mandaba esterminar; eran sus crímenes la idólatría,
Mas á qué venia que un escritor posterior á la es las supersticiones de toda clase, los sacrificios de
pulsion de los cananeos hiciera esta observacion acer víctimas humanas y de sus propios hijos, la impu
ca de la Palestina? No se vé en ello ningun motivo. dicicia mas grosera, las crueldades inauditas etc.,
Bajo la pluma de Moises se encuentra esta observa— amenaza á los israelitas con esterminarlos á su vez,
cion colocada con sabiduria. Acababa de referir la si les acontece imitar estas abominaciones. Mas Dios
promesa que Dios habia hecho á Abraham de dar la habia concedido á los cananeos euatrocientos años pa
Palestina á su posteridad; hace notar al mismo tiem ra corregirse. Cuando promele al patriarca Abraham
po que este pais no se encontraba sin habitantes, dar la Palestina á su posteridad, le declara que esto
que se habian apoderado y establecido en él los ca no tendrá efecto hasta ¿ pasen cuatrocientos años,
maneos y los Pherezeos. Asi al referir la promesa, porque las iniquidades de los amorreos no habian lle
Moises hace tambien mencion de los obstáculos, que gado aun á su colmo. Gén. c. 15, y 16; Sap. c. 12.
parecian oponerse á su ejecucion, obstáculos tanto Pues que estos pueblos eran incorregibles, merecian
mas sensibles, cuanto que entonces todavia no tenia ser destruidos. -

hijos Abraham, Lejos de deducir de aqui que Moises 5.” Cuando Dios resuelve castigar una nacion, es
no es el autor del libro del Génesis, mas bien debe dueño de servirse del azote que juzgue mas apropó
inferirse lo contrario. -
sito, del hambre ó de una peste, de rayo ó de la es
Con qué derecho, continuan los incrédulos, los is pada de un conquistador; cualquiera que sea la ma—
raelitas despojaron, echaron y esterminaron á los ca nera con que castigue, es una impiedad y un absurdo
naneos para apoderarse de su pais? Esta conquista es acusará su justicia. De todas las calamidades la guer
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ra es tambien la que deja mas tiempo para la enmien el nombre de Nuestra Señora de Cancelada, que fue
da y arrepentimiento. Los milagros, que pugo áDios destruida por los calvinistas en el siglo XVI. Los re
hacer á favor de los israelitas en esta ocasión, eran ligiosos entraron en ella despues de las turbulencias
justamente los que hubieran debido convertirá lo políticas; pero la observancia regular empezó á de
cananeos. Josué, c. 2, y 10. -

generar hasta, tal punto que á principios del si

6.”. Por lo que toca al modo, ya sabemos cómo se glo XVII solo habia tres canónigos que vivian á su
hacia la guerra entre los pueblos antiguos: sin cuar capricho, sin ocuparse en cumplir el rezo divino.
el y sin consideracion de ninguna especie. Asi obra En el reinado de Luis XIII, Alano de Solminiach,
ban los cananeos entre sí, asi lo hicieron los griegos á quien dieron esta ahadía, se dedicó á la reforma
contra las naciones que llamaban bárbaras, los ro de ella. Dióá sus religiosos el ejemplo de la vida re
manos contra los persas y contra los pueblos del Nor ular; recibió novicios, los formó segun el espíritu
te, y estos á su vez contra los romanos; de esta ma e su instituto, les dió reglamentos para los ejercicios
nera se tratan todavía las naciones salvages Si las de diarios, la celebracion del servicio divino y la ob
Europa conocen mejor el derecho de gentes y le vio servancia de los votos de pobreza, castidad y obe—
lan mas rara vez, al Evangelio son deudoras de este diencia; les recomendó el cuidado del hombre inte
beneficio; todas las que no son cristianas son tan fe rior, el ejercicio de la oracion mental, la mortifica
roces en la guerra como los pueblos antiguos. cion y otras observancias y prácticas comunes: los
Se supone falsamente que los Israelilas empezaron hizo prometer que no aceptarian beneficios sin el per
por destruirlo todo. Las victorias se sucedieron poco miso de su superior, obligándolos á prestar jura—
á poco, y continuadas por mucho tiempo, Dios mismo mento en sus manos, de no solicitar ninguno directa
declara que conservará espresamente á los pueblos ni indirectamente. Para consolidar y perpetuar la re
cananeos á fin de servirse de ellos para castigar á su forma, Solminiach solicitó y logró de Luis XIII el que
pueblo cuando lo merezca. Josué c. 17, 13, Judith. renunciase su derecho de nombramiento á esta aba—
c. 13, etc. La conquista no concluyó sino bajo los re dia. En efecto, en unos despachos reales del mes de
cuatrocientos años despues de Josué, fal es la noviembre de 1629, registrados en el real consejo,
isloria que nos trazan los ¿ santos de la conduc mandó aquel príncipe que en lo futuro los canónigos
la de Diós y de la de los israelitas; si no se alterara de Cancelada , por el tiempo que perseverasen en su
ninguna circunstancia de ella, no habria ningun mo— reforma, le presentarian tres religiosos profesos á fin
tivo de escándalo. de que nombrase por abad á uno de ellos.
Algunos críticos de mala fé han encontrado uno en Esta congregacion tiene muy pocas casas. El car—
el primer capítulo del libro de los Jueces y 19. Han denal de la Rochefoucault, en calidad de comisario
leido que Dios se hizo dueño de las montañas, pero apostólico, habia hecho un reglamento para reunirla
que no pudo vencer á los habitantes de los valles, con la de los canónigos regulares de Francia. El abad
porque tenian carros armados de hoces; de esto dedu de Cancelada se opuso á esto; mas este pleito se aca
cen que el autor representa á Dios como un guerrero bó en 1670 por una sentencia del consejo privado, en
muy impotente. Mas el testo dice: «Dios estuvo con Ju que se mandaba que los religiosos de las abadías de
» dá, y poseyó la montaña, pero no para arrojar á los Cancelada, de Sablonceaux, de S. Pedro de Verteuil
» habitantes del valle, porque tenian carros ármados en el Bordele, el priorato de Ntra. Sra. de Caors y
º de hoces.» Es un absurdo atribuirá Dios lo que se el de S.Cipriano en la diócesis de Sarlat fuesen man
dice de Judá que poseyó la montaña, si Dios no fué con tenidos en sus antiguas ordenanzas segun la reforma
él para echar á los habitantes de la llanura, esto no de Cancelada, sin que los inquietasen ni obligasen á
prueba que Dios no tuviera poder para arrojarlos. unirse á la congregacion de Francia, ni se permitiese
Con estas pequeñas supercherías los incrédulos de al abad de Cancelada el fundar otros monasterios.
todos los siglos, los marcionitas, los maniqueos, los Sin embargo, en virtud de unos despachos reales
filósofos y demás han tratado de hacer la historia sande 1697 se introduju la reforma de la Cancelada en el
la ridícula y escandalosa, pero tan solo se han acre— hospital de Aubrac, diócesis de Rodes, por haber
ditado de ignorantes. En la Biblia de Avignon t. 3, rehusado la congregacion de Francia el aceptarla.
p. 327 se encuentra una disertacion sobre las emi
0Slle,
nes de los cananeos despues de la conquista de Caneiller de una universidad. Es un eclesiás
co encargado de vigilar sobre los estudios. Tiene
derecho de dar, de autoridad apostólica, á los que
l Cancelada. Congregacion de canónigos regu concluyen la carrera de teologia, el poder ó licen
l"(PS. cia de enseñar, haciéndoles prestar juramento de
defender la fé católica hasta la muerte.
X& Canceladino. (Derechº eclesiástico.) Este En la universidad de París hay dos cancilleres, el
nombre se dá á una congregacion de canónigos regu de Nuestra Señora y el de Sanla Genoveva. La ins
lares del Orden de S. Agustin, que lo tomaron de titucion , los derechos, los privilegios respectivos de
una fuente llamada Cancelada, Fons., cancelatus, por uno y otro pertenecen á la historia moderna y á la
los enrejados de hierro que la rodeaban, situada en ¿ canónica, mas bien que á la teología.
un desierto cerca de Perigueux, á donde se retiraron l célebre Gerson, canciller de la iglesia de París no
algunos eclesiásticos en el siglo XII para hacer la vi se desdeñaba de hacer las funciones de catequista, y
da eremítica bajo el gobierno del abad Foucant. El decia que no las hallaba mas importantes en su clase.
obispo de Perigueux les dió posteriormente un sitio No hablamos de esta dignidad eclesiástica sino para
llamado Borde, donde construyeron una iglesia con hacer notar el celo que la Iglesia ha tenido en todos
 CAN 299) CAN
tiempos por la enseñanza pública, y para disipar la el primero y le colocó en el tabernáculo. Este cande—
ignorancia que los bárbaros habian esparcido en to lero con su ¿ era de oro batido, y pesaba un talen
da Europa. Por espacio de muchos siglos, no ha ha lo. De su pié partian siete brazos encorbados en semi
bido otro recurso contra la barbarie que las escuelas círculo, y terminados cada uno en una lámpara en
eclesiásticas. forma de pico. El santuario, el altar de los perfumes,
la mesa de los panes de proposicion, no estaban
Candelaria. Fiesta que se celebra en la Iglesia alumbrados sino por estas lámparas que se encendian
romana el 2 de febrero, en memoria de la presen porSalomon
la tarde y se apagaban por la mañana.
mandó construir diez candeleros semejan
lacion de Jesucristo en el Templo y de la purificacion
de su santa madre. les á los de Moisés, y los colocó tambien en el san
El nombre de Candelaria hace alusion á los cirios tuario del Templo, cinco hácia el mediodia y los otros
que se bendicen, se encienden y llevan en procesion cinco hácia el Septentrion. Las tenacillas y espavi
este dia por el clero y el pueblo. La Iglesia hace es laderas de los candeleros de Moisés y de Salomon eran
la ceremonia para récordarnos que Jesucristo es la de oro. En la toma de Jerusalen por Nabucodonosor,
verdadera luz que ha venido para alumbrar á todas todos los muebles preciosos fueron trasportados á lá
las naciones, como dice Simeon en el cántico que se Asiria; no es cierto que los candeleros fabricados por
canta en esta ocasion. Salomon fueron devueltos á los judios, cuando Ciro
Los griegos llaman á esta fiesta Hypante, encuen les hizo restituir los vasos del Templo quitados por los
tro, porque el anciano Simeon y la profetisa Ana asirios; pues á lo menos no se hace una mención es
encontraron al niño Jesus en el Templo, cuando le presa de esto. I. Esdr., c. 1, y. 7 y sig. Tan solo se
presentaban al Señor. Es una fiesta y ceremonia an sabe que en la toma de Jerusalen por Tito, existia en
tiguas; el papa Gelasio I, que ocupaba la silla de el Templo un cadelero de oro quese llevaron los ro
Roma el año 492, S. Ildefonso, San Eloy, S. Sofro manos, y le colocaron con la mesa de oro de los panes
nio de Jerusalen, S. Cirilo de Alejandria, etc. hablan de proposicion en el templo de la Paz que Vespasiano
de ella en sus sermones. -
mandó edificar. Se ve todavia en el dia, sobre el arco
Algunos autores dicen que la instituyó el papa de triunfo de Vespasiano este candelero con los de
Gelasio, para oponerla á las lupercales de los paga más despojos de la Judea y del Templo.
nos, que yendo en procesion por los campos practi El candelero de la vision del profeta Zacarias, c. 4,
caban ciertos exorcismos. Esta es la opinion del ve . 2, tenia tambien siete brazos; no se diferenciaba de
nerable Beda. «La Iglesia, dice, ha cambiado fe os de Moisés y Salomon, sino en que el aceite caia á
»lizmente las lustraciones de los paganos, que se las lámparas por siete conductos que salian del fondo
»practican por el mes de febrero por los campos, y de una bomba elevada á su altura; bajaba á esta
»las ha sustituido en las procesiones en que se llevan bomba de dos conchas que la recibian por destilacion
»velas encendidas en memoria de aquella divina luz de las ojas de dos olivos colocados á los lados del can
delero.
»con que Jesucristo ha iluminado al mundo, y que
» la hace llamar por Simcon la luz de las naciones.» En cuanlo á los candeleros que se colocan en los
Otros atribuyen su institucion al papa Vigilio en 536, allares su origen es tan antiguo como el de los cirios
y quieren que fuese una sustitución de la fiesta Pro que se encienden durante el oficio divino. Véase CI—
serpina, que los paganos celebraban con hachas en— Rios: Se habla en el Apocalipsis, c. 1 y 2, de siete
cendidas á principios de febrero. candeleros de oro en medio de los cuales S. Juan vió
Mas estas pretendidas sustituciones se avienen mal un personaje respetable con un aspecto esterior majes.
con el calendario de los paganos. Las lupercales se tuoso y terrible: era el mismo Jesucristo. Con frecuen
celebraban, no el 2 de febrero, sino el 16, y no se cia tendremos ocasion de hacer observar que esta
trataba en esta fiesta ni de hachas ni de cirios. vision de S. Juan suministró el primer modelo de la
La de Proserpina era el 22 de noviembre al fin de litúrgia y del culto divino. Véase el antiguo sacra
las sementera y no en el mes defebrero, Véase la histo mentaria por Grandcolas, 1.° parte, p. 52.
ria religiosa del calendario por M. de Gebelin, p. 37,
07, 17. Si fuera costumbre ir por los campos el dia Canon. Término , griego que significa regla; se
de la Purificacion, los campesinos hubieran conser loma en muchos sentidos.
vado este uso, siendo así que no hay pais en el que En primer lugar, se llama así el catálogo.de los
subsista esta costumbre en el dia. libros que deben reconocerse como divinos ó inspira
Parece, pues, que la Iglesia, al instituir esta fies dos por Dios, y que la Iglesia da á los fieles para que
ta, no tuvo presente mas que honrar los misterios sean la regla de su fe y de sus costumbres.
de Jesucristo y de la santa Vírgen. La sustitucion de El canon de la Biblia no fue siempre el mismo, y
una ceremonia piadosa á un rito pagano sería una tampoco es uniforme en todas las sociedades cristia
cosa laudable, pero es preciso no suponerla sin prue nas; los católicos disputan sobre este punto con los
bas, y sobre falsas alusiones; sería autorizará los proteslantes, Además de los libros del nuevo Testa
hereges y á los incrédulos para que nos echaran en mento, que la Iglesia reconoce como canónicos por
cara sin razon que conservamos los restos del paga— tradicion, ha colocado tambien en el canon del anti
IllSIrl0. guo Testamento muchos libros ¿ los judios no reci
ben como divinos. Esto ha dado lugar á que se dis
Candelero del Templo. En los libros del tingan los libros santos en proto-canónicos, deutero
antiguo Testamento se hace mencion de dos candele canónicos y apócrifos. Luego veremos que los libros,
ros, uno real y otro misterioso. Moisés hizo construir sobre cuya canonicidad se disputa, no son muchos.
 - CAN 300 (CAN
Acerca de este punto se pueden presentar muchas Setenta. Entónces, dice Genebrardo, se pusieron en el
cuestiones importantes: las propondremos, no para de número de los libros divinos el de Tobías, Judith, la
cidirlas todas con confianza, sino para manifestar la Sabiduria y el Eclesiástico. El tercero en tiempo de
manera con que se debe proceder en esta clase de Hircano en el septimo sínodo reunido para confirmar
discusiones. la secta de los fariseos de la que eran gefes Hillet y
I. Hubo entre los judios un canon de los libros Samma, y para condenará ¿ y Barjetos promo
santos? No puede caber la menor duda, coando se sa— tores de la secta de los saduceos. Entonces se pusieron
be que los judios, por un consentimiento unánime, en el canon los libros de los Macabeos, y se confirma
recibieron como divinos los mismos libros y el mismo ron los dos cánones anteriores, á pesar de los saduceos,
número de ellos, y que no han considerado como tales que á ejemplo de los samaritanos no querian re
otros que no dejan de ser respetables. Es necesario conocer como divinos mas que los cinco libros de Moi
que fuesen destinados portales por una tradicion sés. Esta opinion de Genebrardo es una pura ilusion
constanteó por una autoridad que arrastró todas las que no está apoyada en ninguna prueba.
opiniones. Esta unanimidad no pudo ser un efecto de Serrario, mas moderno que Genebrardo, atribuye
la casualidad. Ahora bien, nosotros estamos seguros á los judios dos cánones diferentes: uno de veinte y
de este concierto de los judios. dos libros hecho por Esdras, otro compilado en tiem.
1." Por el testimonio de los antiguos PP. de la p0 de los Macabeos, y aumentado con los libros deute
Iglesia: siempre que se les presentó la ocasion de ro-canónicos. Esta opinion no está mejor fundada
enumerar los libros reconocidos como divinos ó cano que la primera, una y otra están contradichas por los
nicos por los judios, convinieron en dirigirse al mis santos Padres, que nos aseguran constantemente que
mo catálogo como veremos mas adelante. Estaban, los judios no reconocieron como divinos sino veinte y
pues, muy bien informados del sentir de los judios, dos libros.
porque todos lo atestiguan de la misma manera. Si Meliton cita á Onésimo, que ha viajado por Orien
ellos mismos hubieran forjado esta lista ó canon, ha le para saber cuáles eran los libros canónicos, y no
bria alguna variedad en sus pareceres: muchos ha nombra mas que veinte y dos.
brian colocado en el canon algunos de los libros que S.Gerónimo en su prólogo defensivo dice que lo
nosotros llamamos deutero-canónicos, pues que los ha compuesto á fin de que se sepa que todos los libros
consideraban como divinos y los citaban como tales. no comprendidos en los veinte y dos que nombra,
Mas tuvieron la buena fe de convenir en que estos li deben ser comprendidos como apócrifos. Ya se entien
bros no se encontraban en el canon de los judios. de que aquí apocrifo tan solo significa no estar reco
2." Por el testimonio de Josefo. Este historiador nocido como divino: S. Gerónimo ya lo dá á recono
que era de raza sacerdotal, y muy instruido en las cer suficientemente, añade que la Sabiduria, el Ecle
opiniones de su nacion, dice en su primer libro contra siástico, Tobias y Judith no se encuentran en el canon.
Appion, c. 2, que los judios no tienen como los grie En su prefacio sobre Tobias, dice que los hebreos es
gos una multitud de libros; que no reconocen como cluyen este libro del número de las Escrituras divi
divinos mas que veinte y dos; que estos libros contie nas y le colocan entre los apócritos. Repite esto mis
nen todo lo que pasó desde principios del mundo has mo al principio de su Comentario sobre el profeta
ta el reinado de Artajerjes; que aunque tengan otros Jonás,
escritos, estos últimos no tienen entre ellos la misma Orígenes escribe en su carta á Africano que los
autoridad que los libros divinos. Añade que todo ju hebreos no reconocen ni el de Tobias ni el de Judith,
dio está pronto á derramar su sangre en defensa de sino que los colocan en el número de los libros apó -
aquellos. -
crifos.
3.° La persuacion de los judios en el dia. No S. Epifanio dice en su libro de Pesos y Medidas,
cuentan todavía entre los libros divinos mas que n. 3 y 4, que los libros de la Sabiduria y el Eclesiás
aquellos que sus padres, dicen, colocaron en el canon tico no los han comprendido los judíos en el número de
en tiempo de la gran sinagoga. Tambien llaman así las Escrituras divinas.
á la reunion de aquellos doctores que vivieron despues El autor de la sinopsis asegura que Tobias, Judith,
de la vuelta del cautiverio. Asi se espresa el autor del la Sabiduria y el Eclesiástico, no son libros canóni
tratado Megillah en la Gemara, c. 3. La uniformidad cos aunque se lean á los catecúmenos,
de todas las biblias hebreas publicadas por los judios Ninguno de estos antiguos escritores habla de dos
no deja la menor duda acerca de esto. La existencia ni de tres cánones recibidos entre los judíos.
de un canon de los libros santos entre los judios es, III. Cuántos libros contenia el canon de las Escri
pues, incontestable. turas entre los judíos, y cuáles eran estos libros?
lI. No ha existido entre los judios mas que uno solo Es constante que los judíos siempre reconocieron
y el mismo canon de las Santas Escrituras?. - veinte y dos, y tantos como letras tenia su alfabeto,
Algunos autores han supuesto que habia habido designándolos con estas mismas letras; esto es lo que
muchos, y que no todos eran absolutamente semejan hace notar S. Gerénimo en su prólogo defensivo. Es
tes. Genebrardo en su cronologia cree que hubo tres: verdad que algunos rabinos han contado veinte y
el primero en tiempo de Esdras dispuesto por la gran euatro, y otros veinte y siete, pero dividian ciertos li
sinagoga; este canon segun él no contenia mas que bros en muchas partes, y por esto no aumentaba el
veinle y dos libros: el segundo hecho bajo el pontifi número efectivo de veinte y dos.
cado de Eleazar, en un sínodo reunido para deliberar Los que contaban veinte y cuatro separaban las
sobre la version de los libros santos que pedia el rey lamentaciones de Jeremías de sus profecías, y el libro
Ptolomeo, y que nosotros llamamos la version de los de Ruth del de los Jueces, que por lo regular siempre
 CAN 30 CAN
iban unidos. Para designarlos con veinte y cuatro le— y quién es su autor? No es fácil resolver esta cues
tras del alfabeto repetian tres veces la letra jod, en tion. En el dia es una especie de paradoja el decir que
honor del nombre de Dios Jehovah escrito en caldeo Esdras nunca fue el autor del canon de los libros sa—
por tres jod. Lo mismo hacen en el dia los judios. San grados de los judios. Los escritores au: mas juiciesos
Gerónimo cree que los veinte y cuatro añcianos del han tenido,á bien atribuir á Esdras todo lo que
Apocalipsis hacen alusion á estos veinte y cuatro li concierne á la Biblia, y cuyo inventor y orígen se ig
bros. nora. Le han hecho corrector y reparador de los li
Los que contaban veinte y siete dividían en seis bros perdidos ó alterados, reformador de la manera
los libros de los Reyes y de los Paralipómenos que en de escribir, algunos hasta inventor de los puntos vo
otros catálogos no formaban mas que tres, y para cales, y todos autor del canon de la Escrituras.
designarlos añadian á las veinte y dos letras hebreas A pesar de la unanimidad de sufragios sobre este
las cinco finales; esto es lo que dice S. Epifanio en su último punto, nos parece que no seria temeridad el
libro de Pesos y Medidas. dudar de esto y aun sostener lo contrario. Bien se
El canon, pues, siempre era el mismo en el fondo, consulten los libros de Esdras mismo y de Nehemias,
pero el contar veinte y dos era la manera mas ordi bien se busquen pruebas en otra parte, no se encuen
naria, como lo supone Josefo; Ricardo Simon preten tra nada que nos lo asegure: lo que se dice en el cuar
de, aunque sin la menor prueba, que el modo mas an to libro apócrifo de Esdras, c. 1, y. 21 y siguientes
tiguo era el de contar veinte y cuatro. no tiene ninguna autoridad.
Cuáles eran estos libros? S. Gerónimo, voto compe Antes de decidirse en esta cuestion hay muchas di
tente en esta materia, los enumera del modo siguien—ficultades que resolver. 1.° Es preciso asegurarse de
te: El Génesis, el Exodo, el Levítico, los Números, la época en que vivió Esdras: 2.º saber bajo qué rei
el Deuteronomio, Josué, los Jueces con Ruth, Samuel nado vino de Babilonia á Jerusalen; 3.° si todos los
ó los dos primeros libros de los Reyes, los Reyes que libros que estan en el canon habian sido escritos an
son los dos últimos libros de este nómbre, Isaias, Je tes de él: ...º si él mismo escribió el libro que lleva su
remías con sus lamentaciones, Ezequiel , los doce nombre.
profetas menores, Job, los Salmos, los Proverbios, Aun cuando se conviniera en todas eslas cuestiones
el Eclesiastés, el de los Cantares, Daniel, los Paralipó no vemos la autoridad con que Edras haya hecho las
menos en dos libros, Esdras, tambien doble y Ester. grandes operaciones que se le atribuyen, ni cómo los
S. Epifanio da la misma lista. Haeres. 8, n. 6, De judios, naturalmente tan indóciles, se habian de su—
Pond... et Mens. n. 3, , 22, 23. jetar á sus mandatos. No era ni gran sacerdote ni
S. Cirilo de Jerusalen, Catech. , dice á los cris profeta; no tenia mas poder que el que la nacion que
tianos que mediten los veinte y dos libros del antiguo ria otorgarle.
Teslamento, y los retengan en la memoria segun los Es muy probable que la profecia de Malaquias y los
va á nombrar y lo hace como S. Gerónimo y S. Epi Paralipómenos fuesen escritos mucho tiempo despues
fanio. de Edras; que Nehemias le es posterior cerca de un
S. Hilario Prolong. in Psal.; el concilio de Laodi siglo. Por lo tanto Esdras no pudo colocar estos es
cea, can. 60, Orígenes citado por Eusebio, hist. libro critos en el canon.
6, c. 26, formaron el mismo catálogo. Meliton vivia No vemos ningun inconveniente en suponer que el
en el siglo II, viajó espresamente por el Oriente pa canon de los libros del antiguo Testanmento se haya
ra instruirse, y los antiguos tienen en mucha estima formado como el de los escritos del nuevo, por la tra
sus obras; no habla del libro de Ester, lo que puede dicion comun, sin que ningun particular ni asamblea
ser una falta del copista. haya erigido este catálogo y le haya sancionado.
Belarmino, en su catálogo de escritores eclesiásticos, Pertenece á los protestantes el ver si la tradicion
se engañó al decir que Meliton ponia el libro de la Sa judia es una autoridad suficiente para hacernos reci
biduría en el número de las Santas Escrituras, se lee bir libros como divinos inspirados, por palabras de
en Eusebio: SALoMoNos PARoy MIRA Y É KA Y soPHIA; Sa Dios y regla de fé. Han conocido su debilidad, pues
lomonis Proverbia quae et Sapientia porque los pro que recurrieron á una inspiracion del Espiritu Santo
verbios eran denominados nmuchas veces la Sabiduría concedida ácada uno en particular: no es este el mo
de Salomon. Véase la nota de Valois sobre Eusebio, li mento de demostrar la ilusion de este sistema.
bro , c. 26. Por lo que respecta á nosotros tenemos un garan
Josefo, libro 1.º contra Appion c. 2, dice: que su tía¿ nuestra creencia, que es la misma au
nacion no reconocia como divinos mas que veinte y toridad de Jesucristo y de los apóstoles, que dieron
dos libros, cinco de Moisés, trece de los profetas, y á los fieles los libros del antiguo Teslamento como la
otros cuatro que contienen ó himnos en alabanza de palabra de Dios, y estamos seguros de este hecho por
Dios ó preceptos para las costumbres. No parece que el testimonio de la Iglesia. No podemos saber por nin
haya querido designar otros, mas que los que ya he una otra via qué libros se han designado como ta
mos enumerado. Aunque nada diga de las miserias es, porque esto no se halla escrito en ningun libro,
de Job, en su Historia Judia, no se sigue de aquique ni atestiguado por ningun monumento. .. - -

haya considerado su libro como apócrifo, la historia Convenimos en que el canon de los judios se siguió
de este personage no tenia que ver nada con la nacion en los primeros siglos de la Iglesia; los antiguos Pa
judía, y Josefo pudo mirarle como una parábola ó dres no podian hacer cosa mejor, porque enlonces la
poema divino, más bien que como una narracion his Iglesia nada habia determinado; no se habia podido
tórica. todavia comparar la tradicion de las Iglesias de occi
IV. En qué época se erigió el canon de los judíos dente con las de oriente; esto solo tuvo lugar des
TOMO l.
 CAY 302 (AN
pues. Mas los Padres citan el canon de los judios ficado, es una cuestion de hecho que no puede dec
- -

no pretendieron que la Iglesia estaba privada de la dirse sino por los testimonios y por la tradicion de la
autoridad necesaria para aumentarle con nuevos li— Iglesia de los primeros siglos. El saber si es canónico,
bros; suponen lo contrario, pues que ellos mismos inspirado, palabra de Dios, es tambien una cuestion
cilan como libros divinos algunas obras que no esta de hecho, pues que se reduce á saber si ha sido dado
ban en el canon de los judios. como tal á la lglesia por los apóstoles: luege esta se
Los protestantes les acriminan por esto; pero tóra gunda cuestion se debe decidir por los testimonios y
les decirnos por qué admiten el canon de los judios. por la tradicion conmo la primera.
que nos ha sido trasmitido por medio de los Padres, Para esquivar esla consecuencia evidente tratan
al paso que acusan de erroró temeridad á estos testi los protestantes de oscurecerla: dicen que la cues
gos venerables. tion de la autenticidad de un libro es á la verdad una
Desde el año 397 un concilio de Calargo colocó en cuestion de hecho; pero que la canonicidad es cues—
el canon de las Santas Escrituras libros que el conci tion de derecho ó de é. Por consiguiente han decla
lio de Laodicea no habia puesto en él treinta años an rado en sus confesiones de fé, que reconocen los libros
tes. Los Padres de Catargo seguian en esto la tradi de la Escritura por canónicos, no tanto por el comun
cion de las iglesias de occidente, de la cual no tuvie acuerdo y consentimiento de la Iglesia, como por el
ron conocimiento las de Laodicea. Cuando el concilio testimonio é interior persuasion del Espíritu Santo.
de Trento fijó el número de los libros canónicos, y Beausobre; His. del maniqueismo t. 1. Disc. sobre
pronunció el anatema contra los que no se sometieran los libros apócrifos, S. 6, p. ".
á su decision, no lo hizo sino despues de haber con Acabamos de demostrar que la canonicidad de un
sultado la tradicion de todas las iglesias y de todos libro es una pura cuestion de hecho: y ahora añadi
los siglos. mos que segun el mismo Beausobre la autenticidad
En el artículo CANóNico hablaremos del canon de versa sobre una cuestion de derecho ó sobre una dis
los libros del nuevo Testamento. Diser. sobre la cano cusion de doctrinas. Dice que para juzgar si un libro
nicidad etc., Biblia de Avignon t. 1.”, p. 5, etc. era auténtico ó apócrifo, adoptaron los Padres como
V. ¿A quién pertenece decidir si un libro es, ó no primera regla comparar su doctrina con la que habia
canónico? Respondemos sin litubear que á la lglesia, sido enseñada por los apóstoles en todas las iglesias:
y que no podemos saberlo con seguridad por otra via. por segunda regla, el comparar tambien la doctrina
Ilé aquí las pruebas: con la de las obras que eran incontestablemente de
1”. En la palabra lgLEsA probaremos que Jesu los apóstoles ó de los hombres apostólicos, ibid. S. 5,
cristo ha dado á la lglesia, es decir, al cuerpo de los p. 1, 3. Ahora bien: esto es ciertamente un
pastores, la mision y autoridad para perpetuar su exámen de fé y de doctrina: luego no es una pura
doctrina, para enseñar á los fieles dirigir y fijar su cuestion de hecho. Si los Padres pudieron engañarse
creencia. Ahora bien: si hay algun artículo esencial en esto, ¿qué certeza puede darnos su testimonio con
de enseñanza, es el de saber cuáles son los libros que respecto á la autenticidad de un libro?Véase EscR—
debemos recibir como palabra de Dios y como regla TURA SANTA, S. 1 y 2.
de nuestra fé; luego pertenece á la Iglesia y no á nin 4." Es evidente que el pretendido testimonio é in
gun otro tribunal el enseñárnoslo. . terior persuasion del Espíritu Santo á que recurren
2." Es preciso distinguir, la canonicidad de un li los protestantes, es un puro entusiasmo. El Espíritu
bro de su autenticidad: el preguntar si un libro es Santo, sin duda alguna, no hará un milagro respecto
auténtico, es preguntar si fue verdaderamente escrito de cada protestante para darle una capacidad, luces y
por el autor cuyo nombre lleva; si este autor es uno discernimiento que no se tiene naturalmente. La au
de los apóstoles ó uno de sus discípulos; si este libro lenticidad de la primera Carta de S. Clemente es re
no ha sido corrompido ó falsificado: poner en cuestion conocida universalmente, y está probado por la his
si es canónico, es ecsaminar si el autor estuvo inspi toria que este santo papa fue discípulo de S. Pedro tan
rado por Dios, si esta obra debe ser recibida como inmediato como S. Marcos. Esta carta no encierra
palabra de Dios y como regla de fé. Un libro puede ningun punto de doctrina contraria á la que los após
ser auténtico sin que por esto sea canónico: asi nadie toles predicaron en todas las iglesias, ni á la que se
pone en duda que la Carta de S. Bernabé, las dos encuentra en sus obras incontestables. ¿Sobre qué,
Cartas de S. Clemente, el Pastor de Hermas, no fue pues, gira la inspiracion del Espíritu Santo que hace
sen escritas por unos discípulos inmedia los de los após conocer á un protestante que el Evangelio de S. Mar
toles, asi como los evangelios de S. Marcos y S. Lu cos es canonico ó palabra de Dios, y que la Carta de
cas: sin embargo, estos evangelios son obras canó S. Clemente no lo es?
nicas y los escritos de que acabamos de hahlar no lo Tampoco la inspiracion del Espíritu Santo es igual
son, ¿Por qué esta diferencia? Porque la lglesia ha respecto de las diferentes sectas protestantes. Los cal
recibido de los apóstoles estos dos evangelios como vinislas rechazan alta y constantemente el Apocalip
palabra de Dios, y no ha recibido del mismo modo los sis como un libro apócrifo y sin autoridad: los lute
otros escritos. A la Iglesia solo pertenece alestiguar ranos y anglicanos no juzgan de la misma manera.
nos cuáles son los libros que ha recibido de mano de El Espíritu Santo no habla siempre el mismo lengua—
los apóstoles como palabra de Dios y cuáles no: luego ge en la misma secta: en una época la Epístola de
á ella sola toca fijar nuestras dudas sobre este punto. Santiago fue separada de las biblias luteranas; en
3.º Por confesion misma de los protestantes, la otra, la unian á ellas: Lutero en su prefacio sobre
cuestion de saber si un libro es auténtico, si corres esta epístola, deja á cada uno la libertad de juzgar
ponde á tal autor, sino ha sido corrompido, ni falsi de ella segun le plazca: se encuentra en todas las bi
 CAN 303 CAN
blias calvinistas; Wallembourg, trat, IV, part. III, cebimos cómo pueden obstinarse en sostoner que los
secc. 5, S. 3. A cuál de estas diferentes inspiracio libros santos han sido siempre considerados cómo la
nes debemos creer? única regla de fé. Aun cuando nosotros confesára—
Pues que el Espíritu Santo es el que da á conocer mos que la lista de los libros proto-canónicos fué he—
á los protestantes que tal libro es canónico, y que cual cha y fijada desde el segundo siglo, ¿es cierto que
otro no lo es, sin duda tambien les dicta el mismo que no hay otros artículos de fé que los que se encuen—
tal version es fiel, y que cuál otra no lo es: que tal tran comprendidos en estos libros, y que no pueden
pasage tiene tal sentido y no el que le ha sido dado deducirse de los libros deulero-canónicos? Esto es
por las demas sectas. Si esto fuera asi, los protestan— lo que los protestantes aun no han demostrado. Aun
cuando lo hubieran hecho, nosotros preguntariamos
tes no tienen necesidad de erudicion, de investigacio
nes, de discusiones, para saber si los libros son autodavía cómo la fé ha podido ser fijada y cierta en las
sociedades que estuvieron mucho tiempo sin tener
ténticos ó apócrifos, si estan íntegros ó allerados, si
estan bien ó mal traducidos, etc. El Espíritu Santo los libros santos traducidos en su lengua. No dejarian
suple á todo y decide soberanamente de todo. No es de originarse otras cuestiones. Véase EscRITURA sagRA
esto un pura fanatismo? DA, DEUTERo CANóNIco etc.
5.". Desde su origen la Iglesia se ha atribuido el CANONES DE LOS APOSTOLES. Es una colec
derecho y autoridad de decidir cuáles son libros ca cion de reglamentos de disciplina de la Iglesia primi
nonicos. En los cánones de los apóstoles, erigidos por tiva: son en número de sesenta y seis ó de ochenta y
los concilios del siglo I y III, dice á los fieles, can. 76, cinco, segun el modo de dividirlos. Convienen todos en
alias 85. «Hé aqui los libros que todos vosotros, clé— que no fueron formulados, segun los poseemos, por
»rigos y seglares, debeis considerar como santos y los apóstoles mismos; por lo menos no hay ninguna
» venerables, á saber: el Antiguo Testamento, etc.». prueba; pero su autoridad es incontestable. Daillé y
Hizo lo mismo en el concilio de Nicea, el año 325: en algunos otros protestantes han hecho vanos esfuerzos
el de Laodicea en 366 ó 367 ; en el tercero de Carta - para probar que estos cánones son absolutamente su—
go, en 397. Se atreverian á sostener que desde el ¿ que no empezaron á ser conocidos y citados
siglo Il, los pastores de la Iglesia establecidos é ins asta el cuarto ó quinto siglo. El sabio Beveridge,
truidos por los apóstoles, olvidaron las lecciones de obispo de S. Asaph, teólogo anglicano, hace ver que
sus maestros, se atribuyeron una autoridad que no estos cánones ó reglamentos fueron hechos por los
les pertenecia y una inspiracion del Espíritu Santo obispos y por los concilios del segundo y tercer siglo,
que estaba prometida á todos los fieles? que son por consiguiente anteriores al primer conci
Los protestantes no objetan que estas decisiones lio de Nicea; que este concilio los siguió y confirmó.
de los concilios no han sido uniformes ; que no hubo Véase Codea Canonum Eclesiae rimitivae. PP. Apos—
en los primeros siglos canon de las Escrituras univer toles t. I. p. 42, l. II, part. 2.". p. 1.
salmente recibido y seguido: hasta el VIII ó lX, las Efectivamente, no es probable que S. Juan, que
diversas iglesias gozaron de una entera libertad para gobernó la iglesia de Efeso por muchos años, no for
admitir en su canon ó rechazar de él los libros que mase ningun reglamento de disciplina para esta igle
tenian por conveniente. sia; lo mismo decimos de Santiago respecto de la de
Si esto fuera cierto, habria que admirarse de que el Jerusalen; de San Marcos de la de Alejandria, de San
Espiritu Santo, que inspira en el dia á los protestan Pedro y sus primeros sucesores de la de Roma. En
tes sobre este artículo esencial de creencia, no se hu— estas diversas ciudades se celebraron concilios en
biese dignado hablar á ninguna Iglesia por espacio de el segundo y tercer siglo; es natural que los obispos
ocho ó nueve siglos; mas el hecho es falso, pues que que asistieron á ellos se hicieran un deber de seguir
ninguna Iglesia ha rechazado terminantemente nin— esta disciplina respetable, haciendo de ella reglas ge
¿ de los libros que se llaman proto-canonicos: por nerales, y mandando que se observaran en sus Igle
o tanto el canon siempre ha sido constante y univer sias. Es muy justo llamar á estas reglas cánones de
salmente recibido por lo que respecta á aquellos: ya los apostoles, pues que se formaron segun lo que los
no se trataba de saber mas que si debian añadirse al apóstoles y hombres apostólicos habian establecido.
gunos ó no era conveniente. Para saberlo fué pre La preten lida suposicion de estos cánones no es mas
ciso esperar á que se pudiera comparar á la vez la que un equívoco del que han abusado los protestan
tradicion de las diferentes iglesias, tanto de Oriente tes: son apocrifos, en el sentido de que no fueron
como de Occidente. Una prueba de que ha sido hecha escritos por los apóstoles, ni por S. Clemente, á quien
esta comparacion, y que el canon fue erigido unifor se atribuyen; pero son verdaderos y auténticos en el
memente desde el siglo V á lo mas, es que los nesto sentido de que contienen verdaderamente la discipli
rianos y los eutyquianos ó jacobitas, que se separa na que pasaba en el segundo y tercer siglo como es
ron de la Iglesia romana en esta época, colocan en el tablecida por los apóstoles. -

canon los mismos libros que nosotros. A semani, Bi Aunque estos reglamentos pertenezcan directa
bliot. orient., t. , c. 7, S. 7 p. 236. mente á la disciplina, no por esto son indiferentes
Los protestantes tampoco estan de acuerdo entre con repecto al dogma, á la moral y al culto esterior.
sí acerca del tiempo en que el canon de los libros En ellos se vé la distincion de los obispos y la de los
del Nuevo Testamento se fijó irrevocablemente. Bas— simples sacerdotes; la preeminencia de los primeros,
nage dice que no lo fue antes del octavo ó noveno si su autoridad sobre el clero inferior, las costumbres
glo. Mosheim sostiene que lo fue desde el segundo: y deberes prescritos á los ministros de la Iglesia y
pero conviene en que no puede juzgar sino por con á los simples fieles. Tambien se encuentran los nom
jeturas. Despues de semejantes confesiones, no con bres de altar y de sacrificio; lo que se observaba en la
 (CAN 30%) (AN
administracion del bautismo, de la eucaristia, de la puso á la cabeza de la coleccion de las liturgias orien
penitencia, del orden, etc. tales que el canon viene de los apóstoles, lo prueba
De aqui resulta, que la doctrina de los protestantes por la conformidad que se encuentra entre las litur
es tan opuesta á la de los tiempos apostólicos, como su gias siriacas, colas, griegas y latinas: si se nota al
culto y disciplina son contrarios á los que se observa guna variedad en las oraciones, si algunas ceremo
ban entonces, Tan interesados como se muestran en nias se hacen con un orden diferente, todas vienen
boner en duda la autenticidad, deben estarlo los cató— á ser lo mismo en el fondo, to las contienen una invo
icos en sostenerla. Es una suerte para nosotros el cacion á Dios, oraciones por los vivos y los muertos,
que los teólogos anglicanos hayan dilucidado comple la invocacion de los santos, las palabras de Jesucris
tamente esta cuestion, y por decirlo asi, la hayan to para la consagracion, la elevacion ú ostension de la
agotado. eucaristia y la adoracion; deduce con razon que este
CANONES DE UN CONCILIO. Se llaman de esta canon es de institucion apostólica, que ninguno ha
suerte las deciciones de un concilio en materia de dog tenido la temeridad de tocarle ni cambiarle esencial—
ma ó de disciplina; porque son las reglas á que los fie mente. Es la profesion , mas clara y terminante que
les deben conformar su creencia y conducta. Los cá— la Iglesia puede hacer de su fé respecto de la euca
nones dogmáticos estan concebidos ordinariamente en ristia. -

estos términos: «Si alguno dijese tal cosa, enseñase De la misma suerte el padre Le Brun, en su esplica
ºtal doctrina, sea anatematizado»: es decir, separado cion de las ceremonias de la misa l. 3, p. 137, ha he
del cuerpo de la Iglesia y de la sociedad de los fieles. cho ver que el canon de la misa estaba escrito antes del
En cuanto á los cánones ó decisiones de los conci año 0, y que el papa Gelasio lo insertó en su sa
lios y de los soberanos pontifices en materia de disci— cramentario , tal como se seguia entonces, sin la me
plina, corresponden menos á la teologia que al dere— nor alteracion: que el año 538, este canon fue en—
cho canónico. Pero un eclesiástico jamás debe olvi viado por el papa Vigilio á los españoles como de
dar las palabras siguientes del concilio de Trento: tradición apostólica; que hácia el año 600, S. Grego
«Quiere el concilio que todo lo que ha sido saludable— rio el Grande le añadió tan solo eslas palabras: dies
mente mandado por los soberanos pontífices y por los que nostros in tua pace disponas, que colocó la oracion
sagrados concilios, respecto á la vida de los clérigos, dominical antes de la fraccion de la hostia en lugar
su interior y doctrina, etc., se observe de allí en de que en las demas liturgias se decia despues. Desde
adelante bajo las mismas penas que se establecen en aquella época no se ha tocado sino para añadir algu
los concilos anteriores. Ses. 22 de reform. c. 12. Con nos nombres de santos. En este estado fue llevado el
este designio se han colocado en los breviarios nuevos canon de la misa á lnglaterra por el monge Agustin;
los principales cánones que conciernen á la conducta existe de él un manuscrito hecho, antes del año 700.
del clero. Es un absurdo querer tener parte en los El padre Le Brum prueba que el papa Gelasio mis
bienes y privilegios de la Iglesia sin querer estar su— mo no le cambió en nada , sino solo las adiciones al
jeto á sus leyes. sacramentario al cual puso colectas ú oraciones pa
CANONES ARABIGOS del concilio de Nicea. Véase. ra los dias que no las tenian propias, dejando todas
N1CEA. las que ya existian. Antes de él, los papas Inocen
CANON DE LA MISA, regla ó fórmula de oracio cio I, y S. Leon habian hecho lo mismo. Con efecto,
nes y ceremonias que debe seguir el sacerdote para el antiguo canon de la misa romana, que es el del
consagrar la eucaristia. papa Gelasio, tal como estaba en uso es enteramente
Comparando las diferentes liturgias griegas y lati conforme al del sacramentario de S. Gregorio. Véase
nºs, se ve que la misa está dividida en ellas en tres codices sacram. Thomassii, p.196.
partes, á saber: la preparacion, la cccion y la con Asi cuando leemos que el papa Siricio en el si
clusion. La primera comprende desde el principio ó glo IV, Gelasio en el V, y S. Gregorio en el VII,
introito hasta el prefacio ; la segunda que es própia añadieron ó cambiaron alguna cosa del sacramenta
mente el canon, desde el sanctus hasta la comunion: rio, no debe entenderse del canon sino de las demas
la tercera es la accion de gracias. La accion es la mas partes de la misa. En este sentido es en el que Juan
esencial porque comprende la consagracion; los grie Diacono, en la vida de S. Gregorio, l. 2, c. 17 , dice
gos la llaman A NAFon A, cleracion, ya porque antes que este santo papa comprendió en un solo volumen
de empezarla exhorta el sacerdote á los fieles á elevar el sacramentario de Gelasio, separó de él muchas co
sus corazones hácia el cielo, sursum corda, ya porque sas, cambió algunas y añadió muy p0c0.
despues de la consagracion eleva los símbolos euca Con justicia, pues, el concilio de Trento dice que el
rísticos para que los asistentes adoren á Jesucristo canon de la misa fue erigido por la Iglesia, que se
presente. En la liturgia romana, empieza el canon compone de las palabras de Jesucristo, de las de los
con estas palabras: Te igitur. apóstoles y de los primeros pontífices que la gober
Dicen algunos liturgistas que S. Gerónimo fue el naron. Si los pretendidos reformadores hubieran sido
que por orden del papa Siricio, puso el canon en la mas instruidos, si hubieran comparado á la vez todas
forma que le tenemos: otros que fue el mismo º las liturgias que datan desde los primeros siglos no
Siricio, que vivia á fines del siglo IV. Mas ya se de habrian condenado con tanta altivez el canon de la
cia misa antes de Siricio y de S, Gerónimo: habia, misa de la Iglesia romana. Véase LituRGIA.
pues, un canon ó una regla que debia seguir el sa El concilio de Trento pronuncia analema conlra
cerdote: jamás ha sido abandonada esta santa acciontodos los que condenaren la costumbre establecida en
al gusto y discrecion de los particulares. esta Iglesia de recitar en voz baja una parte del canon
El abate Renaudot hace ver en la disetacion que y las palabras de la consagracion, ó que sostengan que
 CAN. 805) CAL
se debe celebrar en lengua vulgar. Sess. 22, can. 9, que componen el antiguo Testamento. Por lo que res
Podrá creerse que á principios de este siglo algunos pecta á los del Nuevo, se han reconocido constante
sacerdotes pronunciaban en alta voz las palabras del mente como canónicos los cuatro Evangelios, las Ac
canon y de la consagracion, á fin de persuadir á las tas de los apóstoles, las catorce epístolas de S. Pablo,
mugeres que repitiendo estas palabras consagraban esceptuando la epístola á los hebreos; la primera epís
con el sacerdote? Ignoraban que la liturgia no se pu tola de S. Pedro, y la primera de S. Juan. Hé aqui,
so por escrito hasta el siglo IV, y que antes de ésta dice Eusebio, segun los Padres mas antiguos, los li
época solo los sacerdotes sabian las oraciones del ca bros que son recibidos de unánime asentimiento.
non. Véanse LENGUAs vULGAREs, SecRETAs y el anti Hist. eclesiast. l. 3, c. 25. Por esto se han denominado
guo sacramentario, por Grandcolas, 1." part. p. 786: protocanónicos.
CANONES PENTENCIALES. Son las reglas que Hubo al principio algunas dudas sobre la canonici
fijaban el rigor y la duracion de la penitencia que dad de la epístola á los hebreos, de las epístolas de
debian hacer los pecadores públicos que deseaban re Santiago y S. Judas, de la segunda de S. Pedro, de la
conciliarse con la Iglesia, y ser recibidos en su co segunda y tercera de S. Juan y del Apocalipsis. Sin
Ill lll 10l. - -
embargo, todos estos escritos han sido recibidos en
En el dia nos admiramos de la severidad de estos todo tiempo por algunas iglesias, y despues por la
cánones, que fueron erigidos en el siglo IV; pero Iglesia universal. Lo vemos por los antiguos catálo
es preciso saber que la Iglesia se creyó obligada á gos de los libros del nuevo Testamenlo, tal como el de
establecerlos: 1.” Para cerrar la boca á los novacia los concilios de Laodicea, de Cartago y de Roma, el
nos y á los montanislas, que la acusaban de usar de que se encuentra en el último canon de los apósto
una indulgencia escesiva para con los pecadores, y les, etc. Esto es lo que determinó al concilio de Tren
fomentar de esta suerte sus desórdenes. 2." Porque to á ponerlos en el rango de los demas, y se han lla
entonces los desórdenes de un cristiano eran capaces mado deutero—canónicos.
de escandalizar á los paganos y quitarles la voluntad Este canon de los libros del nuevo Testamento no
de abrazar el cristianismo: era una especie de apos fué erigido al principio por ninguna asamblea ecle
tasía. 3." Porque las persecuciones que acababan de siástica, ni por ningun particular; se formó poco á
pasar habian acostumbrado á los cristianos á una vi— poco con el consentimiento unánime de todas las igle
da dura y á una pureza de costumbres que era esen sias, y este consentimiento no ha podido ser unánime
cial el conservar. sino cuando estas diferentes sociedades han estado en
Por lo demas, estos cánones no fueron rigorosamen disposicion de dar testimonio de lo que habian reci
le observados sino en la Iglesia griega; el concilio de bido ó no de los apóstoles.
Trento al corregir los abusos que podian haberse in Mas las epístolas, cuya canonicidad fue al principio
troducido en la administración de la penitencia, no puesta en duda, no habian sido dirigidas determina
manifestó ningun deseo de hacer revivir los antiguos damente á ninguna iglesia; la de S. Pablo á los he
cánones penitenciales. Sess. 1, c. 8. No obstante, es breos era para todos los judios convertidos; algunas
muy conveniente conservar su memoria, ya para pre eran para simples particulares y no parecian muy im
venirá los confesores contra el esceso de la relajacion, portantes; no pudieron al principio estar revestidas
ya para refutar las calumnias que los incrédulos se de un testimonio tan auténtico cómo las que habian
han permitido contra las costumbres de los primeros recibido las iglesias de Roma, de Corintio, de Efe
cristianos. Véase PENTENCIA, PENTENCIAL, antiguo so, etc.; lo mismo sucede con el Apocalipsis.
sacramentario, segunda part. p. 563. En vano algunos incrédulos han creido fundar una
CANONES DE LOS SANTOS. Catálogos de los fuerte objecion sobre la lentitud con que fué formado
santos reconocidos ó canonizados por la Iglesia. Véa el canon de los libros del nuevo Testamento. Este ar
se CANoNizacioN. gumento puede incomodar á los proleslanles, que no
Es un uso tan antiguo como el cristianismo, el re quieren mas regla de fé que la Escritura Santa; á
comendar á Dios en la liturgia los fieles vivos, prin ellos toca hacernos concebir cómo la Iglesia cristiana
cipalmente los obispos y pastores; era en otro tiempo udo estar tan largo tiempo sin saber con certeza qué
un testimonio de comunion de fé con ellos y de cato ¿ debia ó no considerar como Escritura Santa.
licidad. Véase Dipticos. Siempre se ha orado por los Por lo que toca á nosotros, que sostenemos como
muertos, y se ha hecho mencion en el canon de los nuestros padres que la principal regla de fé es la en
santos, principalmente de los mártires, pidiendo á señanza pública, constante y uniforme de la Iglesia,
Dios la gracia de participar de sus méritos é interce no vemos por qué era tan importante que el canon de
sion. Asi en el canon de la misa se encuentra tam las Escrituras fuese prontamente formado y univer
bien el canon
mentado deenlosdia.
de dia santos, y su número se ha au
w
salmente reconocido.
Eusebio, Hist. ecles., l. III, c. 25, distingue tres
Ciertos críticos han deducido muy inoportunamen clases de libros del nuevo Testamento. 1." Los que
el canon de la misa no es muy antiguo, porque fueron recibidos desde luego por un asentimiento uná
se halla en él el nombre de algunos santos que no son nime, y cuya enumeracion hemos hecho mas arriba.
de los primeros siglos: no calculan que estos nombres 2."Los que no fueron reconocidos al principio por to
se han añadido á medida que los santos han muerto. das las iglesias sino solo por algunas, ó que han sido
citados como Sagrada Escritura por algunos autores
«Uanónico. Se llama un libro canónico, cuando eclesiásticos. Pero esta segunda clase se divide en dos,
se encuentra en el canon ó lista de las Santas Escri una de los libros que despues fueron recibidos por todas
turas. En la palabra canon hemos visto cuáles son los las iglesias y fueron llamados deútero-canónicos; ya

*.
 CAN 306 CAN
los hemos designado; otro de los libros que no han ningun vestigio se halla, aun en las capitulares que
sido colocados en el canon; pero se han conservado hizo Carlo-Magno en Heristal en el año de 779 "E
como libros útiles y respetables. Tales son los libros concilio de Chalons-sur-Saone, celebrado en 813,
del Pastor, la carta de san Bernabé, las dos cartas de habla de ellas como de una cosa nueva; el de Ma.
san Clemente, etc. 3." Los libros supuestos y forjados guncia, que fué poco despues, las designa diciendo:
por los hereges para antorizar sus errores, libros que que las religiosas que seguian la regla de s. Benito
la Iglesia católica ha rechazado siempre, tales son los viviesen regularmente, que las que no hiciesen pro
falsos evangelios de Santo Tomás, de S. Pedro, los esion de ella viviesen canónicamente. En tiempo de
falsos apocalipsis, etc. Luis el Bueno las canónigas conservaban la propie—
De esto resulta que la única razon que nos determi dad de sus bienes, con la obligacion de que los ad
na á considerar tal libro como canónico, divino ó ins ministrase un procurador; les era permitido tener
pirado, es la tradicion ó la autoridad de la Iglesia. criadas, lo que no era concedido á ninguna otra clase
Aun cuando estuviéramos íntimamente convencidos de religiosas; y esto duró hasta el siglo XII, en que
de que un libro ha sido verdaderamente escrito por un Eugenio III en la celebracion del concilio de Reims
apostol ó por un discípulo de Jesucristo, y que es por en 118 obligó á las que vivian bajo la regla de San
consiguiente auténtico; aun cuando nada contuviera Agustin á que renunciasen á toda propiedad y abra—
ue no fuera cierto y conforme á lodos los artículos zasen la vida comun, en cuya época se hicieron ca—
¿ nuestra creencia, esto no bastaria. La divinidad de nónigos regulares. Desde aquel tiempo se fundaron
los libros sanlos no versa principalmente ni sobre la varias congregaciones, siguiendo todas la regla de
certeza histórica, ni sobre las reglas de crítica, ni San Agustin con algunas modificaciones. No se dife--
sobre el testimonio de ningun particular sino sobre rencian de las otras religiosas mas que en el titulo y
la autoridad y garantía de la Iglesia; y tampoco ve— en la sobrepelliz y muceta que usan muchas de ellas,
mos sobre qué otro fundamento pueda establecerse. á imitacion de los canónigos regulares; pues en lo
Cuando los protestantes hacen profesion de no reci demas están sujetas á clausura, y pronuncian los
bir como divinos sino los libros cuya canonicidad haya tres votos solemnes de religion. En Roma se conocen
sido universalmente reconocida en los primeros si— las canónigas de S. Juan de Letran; en la de Flandes
glos, cometen una falsedad; la epístola á los hebreos las de Vindeseint; en Francia las de S. Esteban de
que admiten, fué dudosa por algun tiempo. Por otra Reims; las de Nuestra Señora de la Victoria en Pic.—
parte, si el sentir unánime de la antigua Iglesia basta pus, cerca de París; los de Santa Perina de la Villette
para enseñarnos que tal libro es divino, no vemos y de algunos otros parages no pertenecen á congre
por qué no basta para enseñarnos cómo debemos en gacion alguna. Las que tienen monasterios en el rei
tenderlos, ó para convencernos de que tales ó cuales no, son: las canónigas de la Orden del Santo Sepulcro,
dogmas son revelados. que la condesa de Caliñi, hija del marqués de Mony,
Todavia concebimos menos sobre qué fundamento y viuda de un príncipe de Lorena, mandó venir del
creen los protestantes la autenticidad de los libros aun pais de Lieja para establecerlas en Charleville en
de los protocanónicos, cómo se atreven á fiarse en el 1620; las canónigas premostratenses, que ya no tie
testimonio de los antiguos autores eclesiásticos, al men monasterios; las canónigas hospitalarias; las ca
paso ¿ nos los representan como hombres de una nónigas de Nuestra Señora, que se fundaron en
probidad muy dudosa, que no han escrupulizado nun 1601, por el celo del P. Fourier, fundador de los ca—
ca el cometer fraudes piadosos, ni mentir por la glo nónigos regulares de Lorena, las cuales se estable—
ria de Dios y por la propagacion de la fé. Véase Mos— cieron en una casa de San Mihiel. La bula en que
heim, Instit. Hist. Christ. 2." part. c. 2, p. 23. fueron erigidas en congregacion es de 1603: consi
guieron en 1615 otra para hacer los tres votos re
34, Canóniga. (Derecho canónico.). Esta pala ligiosos, y otra tercera en 1616, permitiéndolas la
bra tiene dos sentidos diferentes. En primer lugar instruccion de las niñas esternas. Recibieron sus cons
se llaman canónigas las jóvenes que profesan la regla tituciones en 1617 del señor obispo de Toul, el cual
de S. Agustin, y tienen casi el mismo hábito que los
tenia facultades del papa para confirmarlas; algunos
canónigos de aquella Orden. En segundo lugar se da monasterios recibieron otras nuevas en 1541, que
el nombre de canónigas á unas monjas que poseen son las que siguen los monasterios de esta congrega
una prebenda en un cabildo, sin precision de renun cion, que están situados en el arzobispado de Sens:
ciar sus bienes ni hacer ningun voto. Se ¿ pero esta pequeña diferencia no ha sido un obstáculo
aqui que hay dos especies de canónigas, unas re. para que permanezcan todas las casas en una perfec
lares, que se diferencian muy poco de las otras reli la llniOn.
giosas; otras seculares, que no tienen mas obligacion CANONIGAS SECULARES. Son entre nosotros
que rezar el oficio canónico en el coro, y visten ununas señoritas distinguidas, qne haciendo ciertas
hábito eclesiástico que les es peculiar. pruebas de nobleza, entran en un cabildo, sin hacer
CANONIGAS REGULARES. Creen algunos au voto de perpétua pobreza, obediencia ni castidad,
tores que traen su origen desde San Agustin, que y sin contraer otra obligacion que la de observar los
fundó en su Iglesia de Hipona un convento de santas estatutos del cuerpo á que pertenecen. Aunque son
mugeres que vivian en comunidad bajo la regla que canonigas, conservan la libertad de retirarse ó salirse
él las habia dado; pero con la misma, razon podria cuando les parece conveniente, y aun tienen la de
decirse que lo traian de las diaconisas de la primitiva casarse, si prefieren el matrimónio al celibato. En
Iglesia. Lo que hay de cierto es, que la voz canó— esta especie de cabildos se distinguen por lo regular
miga fué desconocida en la Iglesia antes del siglo IX. tres clases de personas: primera, la abadesa y las
 CAN (CAN
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dignatarias, ó las superioras y oficialas que en mu los establecimientos instituidos para la educacion de
chos de estos monasterios hacen voto de castidad per las señoritas de Sain Cyr, que se sostienen con bie
tua: segunda, las canónigas prebendadas, que nes puramente eclesiásticos, por qué motivo podre
juntamente con la abadesa y las dignatarias compo— mos desaprobar los cabildos de canónigas?
nen el cuerpo del cabildo; tercera, las canónigas no Los capítulos de canonigas, aunque se componen
¿ , sino simplemente admitidas, que se de personas legas, que no renuncian enteramente
aman coadjutoras ó sobrinas, y gozan los honores al siglo, se consideran como corporaciones ecle
y rerogativas de la comunidad. Su obligacion se siásticas; constituyen parte del órden clerical, go
reduce á cantar el oficio de la Virgen, lo mismo que zan de los mismos privilegios y tienen los mismos
los canónigos; ocupacion que no es penosa mas que derechos reales y personales. En un sínodo de Cam
r ser diaria. bray de 1575 se dice que las abadesas de estos cabil
El P. Mabillon en varios pasages de sus obras, y dos eran convocadas á las asambleas generales; tres,
especialmente en su prefacio sobre el siglo II de los procuradores de otras tantas abadesas, suscribieron
benedictinos, asegura y prueba que la mayor parte á nombre suyo en el sínodo de Cambray. Aunque las
de los cabildos de las canónigas eran en su orígen canónigas seculares se tienen como independientes de
monasterios de simples benedictinas; que en el siglo la jurisdicion episcopal, porque estan como sujetas
IX, época memorable de tinieblas y relajacion, rom— inmediatamente á la Santa Sede, no tendria valor
pieron estas religiosns los vínculos monásticos, y alguno esta prerogativa contra la ambicion de un
pasaron al estado de canónigas regulares, y de este obispo que se la disputase; porque el concilio de
al de seculares. Con efecto, se halla usado este nom Trento en la sesion 22, cap. ¿? , dá facultades á los
bre por la primera vez en el capítulo 52 de un con— obispos para visitar los cabildos de canónigas, aunque
cilio, celebrado en Chalons en 813. Por la regla que gocen de esencion; pero si algun cabildo se hallára
se hizo para ellas algunos años despues en un concilio en este caso, podria reclamar la autoridad de Van
de Aix-La-Chapelle se ve, que las canónigas eran espen en su jurisdicion eclesiástica, en la que
todavia regulares, y que habia muchas que no eran asegura que las canónigas estan bajo la proteccion
nobles. Dicha regla recomienda el voto de continen inmediata de los soberanos, y no pueden visitarlas
cia, al cual se las suponia sujetas, y las prescribe los obispos sin permiso particular para ello.
que lengan un dormitorio y un refectorio comunes, Seria muy difuso hacer una relacion circunstan
prohibiéndolas, que traten, como es regular, á las ciada de las leyes constitutivas de los varios cabildos
que no lo son. La observancia regular y la vida co de canónigas que hay en Francia. Los del Franco -
mun se perdieron entre ellas casi al mismo tiempo, y Condado se diferencian de los cabildos de canónigas
del mismo modo que habia sucedido con los canóni de Flandes. Estas se creen superiores á los cabildos
gos. El cardenal de Vitri, testigo ocular de aquellas que hay en el Hoinaut, en la Álsacia y en el Braban
revoluciones, se lamenta en su historia del Occidente, te; los cuatro cabildos de Lorena se creen iguales y
cap. 5." La Iglesia no influyó en aquellas innovacio— aun muy superiores á los otros, las canónigas de los
nes, porque las unas se hicieron sin llegar á su notitres obispados y de la Champaña tienen tambien su
cia, y las otras sin que lo pudiese remediar. Los gloria óvanidad. Como orecen algun interés sus cons
soberanos pontífices, en medio de la barbárie univer tituciones, especialmente á la alta nobleza del reino,
sal, no podian oponerse al torrente de abusos que vamos á referir las preeminencias que goza el cabildo
devastaron, por decirlo asi, al mundo cristiano des de Remiremont, uno de los mas considerables que
de el siglo IX al XV. El papa Bonifacio VIII, al mis hay en este particular, segun la opinion de todos. Se
mo tiempo que comprende los cabildos de canónigas compone de una abadesa, varias dignatarias y sim
en los reglamentos, relativos á las elecciones, declara ples canónigas, que son prebendadas ó sobrinas. Las
en términos formales, que no se entienda que aprueba primeras poseen una ó mas prebendas con varias ca
en su constitucion el estado, el orden y la regla de las sas canonicales, y las segundas, que no tienen casas
canónigas, cláusula que la mayor parte de sus suce ni prebendas, participan solo de las distribuciones
sores han renovado en las bulas que tratan de las que hay todos los dias en el coro. Cualquiera cano
canónigas. niga puede abandonar su estado y abrazar el que le
A pesar de eslas quejas y desaprobacion manifiesta, parezca sin permiso de la abadesa, ni del cabildo; y
el tiempo ha mudado las opiniones sobre este punto, para ejecutarlo escriben una carta sencilla las seño
como en otros infinitos; esta especie de cabildos sub. ras sobrinas dando gracias á sus tias, y estas la co
siste hoy, y son juzgados por mas útiles, y mas bien munican al calbildo. La misma formalidad guardan
fundados que la mayor parte de otras instituciones las señoras prebendadas. Para ser canonigas de Re
religiosas. Son unos asilos, donde la nobleza indi Rniremont se necesitan las pruebas de nobleza militar
gente puede refugiarse, ejercilando todas las virtudes por línea paterna y materna, cuyas pruebas deben
sociales, y de donde puede salir para el mundo, ser en número igual por ambas líneas, es decir, cua
cuando le interese el hacerlo. tro líneas en la descendencia del padre y cuatro en la
El estado de las canonigas seculares se diferencia línea de la madre; las líneas deben ser de dos
poco del de los eclesiásticos simplemente tonsurados, cientos años de filiacion, y para probarlas se pre
que pueden renunciar sus beneficios lo mismo que sentan los testamentos, los contralos de matrimonio,
ellas, volver al siglo y casarse cuando les parezca los actos de pleito, homenage ú otros equivalentes
conducente. Si vemos sin escandalizarnos á los caba sacados de los mismos sitios en que se hacen las lí
lleros de S. Lázaro, aunque legos y casados, neas. El cabildo no admite mas que los documentos
que
obtienen beneficios; si se han célebrado con razon originales ó copias conformes y legalizadas por los
 CAN 308 CAN
jueces del distrito donde se hagan, y en el caso que »sion nuestros cuatro cabildos, hemos resuelto, para
parezcan sospechosas. La pretendienta tendrá que uque sean mucho mas ilustres, que las pruebas para
presentar el arbol genealógico; el cabildo remite unas »la línea paterna se estiendan á inas de lo que ecsis.
cartas circulares á la abadesa y canónigas que se ha »gen los estatutos; pero que en compensacion se dis
llan ausentes; esta circular contiene el nombre de la »minuya su rigor en la linea materna; lo que pre
pretendienta, su pais y el blason de las ocho líneas. » senta ventajas conocidas á la nobleza mas ilustre, de
Si las líneas estan conformes todas juntas, aunque no »las que es muy justo participen igualmente nuestros
lo esten por separado, se admiten despues de haberse » propios vasallos y los del rey cristianísimo. Por esla
cumplido cuatro meses del dia en que fueron presen »razon mandamos que para entrar en adelante en los
tadas. » cuatro cabildos de Remiremont, Bouxieres, Epinal
Cuando hay alguna duda sobre los títulos justifi » y Poussey, las pruebas de la nobleza se hagan de
cativos, ya sea que ocurra en el cabildo, ó que la sus »ocho grados en vez de cuatro para la línea paterna.
cite una sola canoniga, entonces las que forman la » restringiendo las de la línea materna los mismos
oposicion escogen cada una un caballero jurado en el » ocho grados». Esta resolucion se registró en la cor
mismo pueblo. Estos jurados no deben tener el ape— te soberana de Nancy aquel mismo año, dándole mas
llido de la pretendienta, ni estar ligados á ella por autenticidd el 23 de abril de 1775 por un decreto
los vínculos del parentesco hasta el grado de primos del consejo, que impuso á la abadesa de Bouxieres la
segundos. Estos son los que juzgan la disputa ó pleito obligacion de atemperarse á esta ley cuando se tra
en primera y última instancia: si no hay avenencia, taba de las pruebas de la señorita de Toul en Voivre,
eligen un árbitro que ha de ser tambien caballero, el por haber suspendido el aprebendará dicha señorita,
cual bajo juramento termina la desavenencia. La re ecsigiéndoselas conforme á la costumbre antigua, y le
solucion se pone en conocimiento del cabildo, el cual precisaron al cabildo á recibirlas conforme á la nueva
manda registrarla en sus libros, y en seguida la aba declaracion, la cual han obedecido despues sin pro
desa ó deana, y en su defecto la canoniga mas anti testa ni reserva los cabildos de Bouxieres, de Epinal
gua es la que aprebenda ó recibe á la señorita. Las y de Poussey. Unicamente se opuso á esta innovacion
señoras que se oponen tienen tres meses de término el cabildo de Remiremont por una acla capitular; y
para nombrar los árbitros, y nueve para que se con aunque por una orden reservada del rey se mandó
cluya el espediente y recaiga la sentencia. Ademas arrancar de sus libros de registro, no ha dejado este
de los caballeros que henos dicho, á los que no se de seguir la costumbre antigua, haciendo antes las
recurre sino en casos estraordinarios, es de regla el prnebas, segun la declaracion de enero de 1761,
coger tres caballeros para examinar las pruebas de añadiendo despues á mayor abundamiento las des
la pretendienta: este examen debe hacerse dentro cendencias de la línea materna que dispensa la decla
del año de la presentacion de los papeles, y estosju racion. Esta prueba superabundante manifiesta la de
ran las pruebras sobre el libro de los evangelios en el cidida resolucion en que está dicho cabildo de soli
coro de la iglesia de Remiremont. Luego que estan citar el restablecimiento del antiguo estado de cosas
juradas las líneas de la descendencia, la señora tia en este punto. Si lo logra y la declaracion, solo tiene
¿ á su sobrina y la presenta al cabildo; pero no fuerza en cuanto á los otros tres cabildos de Lorena,
uede aprebendarla hasta seis meses despues del nom entonces se verificará la separacion entre aquel y es
¿ como no sea que caiga peligrosamente tos, y la preeminencia de Remiremont adquirirá el
enferma. Cualquiera canoniga prebendada que esté título de posesion. Por lo demas ya está decidida en
en peligro de muerte puede nombrar á una sobrina parte y de hecho esta preeminencia; porque en
que la suceda en sus prebendas; este nombramiento cualquiera ocasionen que se han reunidolos cuatro ca
debe estenderse ante un notario que pone el documen bildos, no solo ha obtenido la presidencia el de Re—
to en manos de la señora elegida, y esta se encarga miremont, sino que aun las simples canónigas de este
de requerir á la deana ó á la que haga sus veces para cabildo han precedido á las dignatarias y aun á las
que reuna el cabildo al instante; alli se presenta el abadesas de Poussey, de Bouxieres y del Epinal cuan
acta de nombramiento y se pone en ejecucion como do han sido diputadas de la Iglesia de Remiremont.
si la tia estuviese presente. Es indispensable, sin em Un caso igual sucedió en estos últimos tiempos, sien
bargo, que la señora tia esté en Remiremont, que ya do Estanislao, duque de Lorena. Habiéndose encon—
hayan sido juradas las lineas de la descendencia de la trado al mismo tiempo las diputadas de los cuatro ca
señorita, y que el acto de aprehendarla se haga vi bildos en la audiencia de Luneville, madama de
viendo la tia ó veinte y cuatro horas despues de su Gramnont, que no era mas que una simple canoniga,
muerte; y, esta es la época que arregla para siempre representaba al cabildo de Remiremont, presidió á
el órden de antigüedad que han de guardar las canó l abadesa del Epinal y á las dignitarias de los otros
migas en la iglesia, en las procesiones y demas cere cabildos. Contribuyen acaso tanto como su antigüe
mónias públicas. Esto que acabamos de referir res dad á conservar una prerogativa tan lisongera las
duqueáde
pecto lasLorena,
pruebas en
de elnobleza
año delo1761,
modificó Estanislao, riquezas del de Remiremont, pues reune toda especie
dando una de de derechos feudales: su jurisdicion se estiende á
claracion para los cuatro cabildos de canonigas que varias ciudades, uu gran número de aldeas y á una
hay en aquella provincia, esplicándose en esta forma: décima quinta parte del terreno de la provincia;
«Queriendo atender con mas solicitud que nuestros sus rentas forman un capital de mas de ¿
» predecesores, y confirmar al mismo tiempo las pre rs: vn. La abadesa tiene para su mesa treinta y
» eminencias, prerogativas, libertades, esenciones y seis prebendas; otras setenta y nueve estan distribui
«en general todos los derechos de que estan en pose das en veinte y un lotes; á saber, cinco de cinco pre
 (CAN 300) CAN
bendas, ocho de á cuatro, seis de tres, y dos de dos. se ocupan, por causa de ausencia se
Las rentas
La señora que tiene cinco prebendas tiene derecho distribuyen á las canónigas que asisten todos los dias
para aprehendar tres sobrinas; de las dos primeras á los oficios de la iglesia. La señora deana, ó en su
tocan á cada una dos prebendas. La señora que tiene ausencia la que hace sus veces, tiene facultad de
cuatro solo puede tener dos sobrinas que reparten por reunir los cabildos ordinarios y estraordinarios: y en
igual las rentas desu tia. La que tiene tres puede apre caso de estar ausente ó no quererlo hacer, le toca á
bendar tambien dos sobrinas, de las cuales la primera la señora secretaria, después á la canóniga mas anti
lleva dos prehendas. La señora que tiene dos, solo gua, segun el órden de la lista. La señora abadesa es
puede aprebendar una sobrina; y por último, la que no convocada á todos los cabildos, escepto cuando se
iiene mas que una no tiene derecho á prebendar á trata de deliberar sobre pleitos ú otros negocios con—
otra. Cuando fallece una canóniga sin tener sobrina tra ella. Cuando está ausente de Remiremont, ó en—
alguna, recaen sus prebendas en la mesa de la aba ferma, y hay que tratar asuntos de consecuencia, la
desa; pero la abadesa debe presentar al cabildo de aguardan únicamente por espacio de quince dias.
seis en seis meses una señorita que hereda una parte Cualquiera canóniga tiene derecho á que se reuna el
de las prebendas de la difunta. Estas presentaciones cabildo, bastándole el dar aviso á su deana, ó á la
se repiten sucesivamente hasta que las prebendas que que haga sus veces, esplicándola sumariamente los
ha heredado la abadesa queden fuera de la mesa. La motivos.
señora sobrina tiene que hacer un año de residencia Ademas de lo que acabamos de referir con respecto
inmediatamente despues que la han dado la preben á lo interior del cabildo de Remiremont, es bastante
da; mas si se interrumpe este tiempo con alguna au esencial el añadir alguna cosa sobre los canónigos de
sencia, tiene que volver á comenzar el año entero. esta iglesia, que son diez, y no tienen mas funciones
Las señoras sobrinas, despues del año de residencia, que las de capellanes ordinarios. Sin embargo, han
no estan obligadas á ella mas que la tercera parte del pretendido formar cuerpo con las canónigas, hacien—
tiempo de sus ausencias: es decir, tres meses de re do parte constituyente del cabildo. La cuestion se agi
sidencia, por nueve de ausencia, y seis meses por tó á principios de este siglo, y los canónigos alegaban
diez y ocho; pero este derecho tiene sus límites, en su favor algunos testos sacados de las cartas de
pues la ausencia no puede durar cinco años; durante Leon X, de Clemente VIII, de Sisto V y de Paulo V.
el año sesto hace el cabildo un á la ca En 1727, Armand Gaston, cardenal de Rouen , fue
nóniga ausente, el cual se fija en las casas de la se delegado por la Silla Apostólica para terminar esta
ñora tia, y despues de concluido el año pierde su tí desavenencia y trabajar en otros objetos de reforma
tulo de cañóniga la señora sobrina si no se presenta á en dicho cabildo. El cardenal denegó á los canónigos
residir; pero si se presenta en el término de aquel año sus pretensiones, decidiendo que la mezcla de hom
se la condena á un año de residencia contínua; y si se bres y mugeres chocaria á la decencia, y que los de
ausenta de nuevo en este tiempo, vuelve á incurrir rechos de señorío de la Iglesia de Remiremont perte
en la misma pena á los cuatro años de ausencia, en necian esclusivamente á la abadesa y canónigas: lo
vez de será los seis como antes. La residencia de las único pue pudieron conseguir en estas circunstancias
canónigas prebendadas es de mas duracion que la de los cañónigos fue que serian llamados al cabildo cuan.
las señóras sobrinas: cuando tienen mas de una pre do se tratara de asuntos perteneciente á ellos: y por
benda, deben residir siete meses por cada ausencia lo demas estan sometidos á la autoridad de la abadesa
de cinco, catorce por diez, y veinte y uno por quin y del cabildo. En las infracciones de los estatutos,
ce, etc.; pero las que no tienen mas que una preben cualquiera canónigo esta sujeto al cabildo como juez,
da es á la inversa de aquellas. Cuando se ausenta una despues de las amonestaciones preliminares, que so—
canóniga prebendada por tres años consecutivos, al lamente la abadesa puede hacerles, si el culpable per
principiar el cuarto la notifican la residencia, y se severa, se le imponen penas pecuniarias, que se apli
renueva cada cualro meses del mismo año, siendo can á los pobres; si el caso fuese muy grave, entonces
suficiente se fije en una casa canonical; pasado este los canónigos son llamados al cabildo, y con su pare
tiempo, la señora ausente pierde sus prebendas y su cer se recurria á Roma pidiendo un comisario apos
títuló de canoniga por derecho; pero si vuelve en el tólico que pudiese proceder contra el acusado, usan
término del cuartó año, tiene que residir dos años do de las censuras, de la privacion de sus prehendas
consecutivos para recobrar sus rentas; y altando á y demas penas canónicas; pero hasta procedier á es las
esta obligacion se le ocupan ó embargan desde el dia formalidades el cabildo puede dar una especie de sen
de su ausencia. En este segundo caso no tiene dere tencia provisional, prohibiéndole hacer las funciones
cho á ausentarse mas que por lres años, y en el últi eclesiásticas en su iglesia solamente, y obligando á
mo, se le renueva la notificacion de residencia; y si los otros á cumplir las cargas, asignándoles, por su
no comparece á su debido tiempo pierde, ipso facto, puesto, cierto honorario de la renta del acusado.
sus prebendas y su título de canoniga. -
No se tienen lantas formalidades con las canonigas
La residencia de las señoras deana y secretaria es que se encuentran en el mismo caso. Si alguna fuese
aun mas rigorosa; porque dura los ocho meses de ca convencida de amistad ó aficion sospechosa, seria pri
da año: las otras dignitarias residen siete meses;, y vada al instante de su voto activo y pasivo en el ca
en cuanto á la abadesa, no tiene mas leyes que los bildo, y luego puesta de pupila en casa de una cano—
santos cánones relativos á la residencia de los prela niga añciana: si hubiese pecado contra el pudor, se
dos y otros beneficios; es decir, que hace lo que la la quitaria la toca en presencia de todas en el coro, y
parece arreglado, como que el cabildo no tiene mas sus sobrinas sucederian al instante en sus prehendas;
potestad sobre ella que la via ordinaria de justicia. y- siTOMO
fuese sobrina, la señora su tia podria aprebendar
, 5
 º « (CAN 310 CAN
á otra. La abadesa pronuncia esla sentencia, toman ble de la naturaleza y que correrán la misma suerte
do el parecer de las doce señoras mas antiguas del que todas las anteriores?
cabildo, entre las cuales se deben contar la deana y Es lo mismo que si se preguntara, para qué sirve
la secretaria, cuando no tienen interés en el negocio. dar la salud á nn enfermo que tarde ó temprano vol
Mr. el abad Remy me ha comunicado este artículo.) veráá caer en otra enfermedad por el destino inevita
(Estracto del Diccionario de Jurisprudencia) ble de la naturaleza? Justamente porque la humani
dad tiende naturalmente al desorden y al vicio es por
Camón igo, camonesa. De la voz griega lo que es preciso sostenerla y levantarla despues de
KANoN, regla, se forma canonicus, hombre que vive sus caidas. Aun cuando un establecimiento util, una
bajo una regla; se llamó kanónigos, y despues canóni reforma saludable, no durara mas que un siglo, otro
gos, á los eclesiásticos dedicados á una iglesia cate tanto se ha ganado sobre la fragilidad de la natura
dral ó colegiata, quecon el designio de llevar una vida leza en provecho de la virtud.
mas edificanle, ¿ una regla comun y un ré
gimen muy análogo al de los monges. Se ha dado Canónigo. (Derecho canonico.) Tomado en
tambien el nombre de canonesas á las jóvenes ó mu en sentido mas lato, se llama canonigo todo aquel que
geres piadosas, que sin hacer los votos solemnes de vive segun la regla particular del cuerpo ó cabildo á
religion, se reducian á la misma vida. La esperiencia que pertenece; y en un sentido mas limitado y en el
de todos los tiempos prueba que esta vida uniforme uso comun, un canonigo es un eclesiástico que posee
contribuye mucho para inspirar el gusto á la virtud un canonicato ó prebenda en una iglesia catedral ó
y á la piedad. colegial. Tambien hay canónigos legos, de los cuales
La institucion, los deberes, los derechos de las di hablaremos despues, y comunidades de religiosos y
ferentes especies de canónigos, son un objeto de dis religiosas que tienen el título de canónigos y canóni
ciplina qué corresponde á los canonistas. Tan solo ha gas; pero se distinguen de los ¿ , añadiendo á
remos observar que si en los primeros siglos todas la circunstancia de canónigos la de regulares, de los
las instituciones piadosas tenian un aire y tono mo cuales hablamos en su lugar.
nástico, es porque entonces apenas se encontraba la En el origen de su institucion todos los canónigos
decencia y regularidad mas que en los claustros. eran regulares, ó hablando con mas esactitud, no se
Cuanto más aversion y prevencion se tiene en nues conocian dos especies de canónigos. Todos los cléri
tr0 siglo por este estado , tanto mas es de temer la gos-canónigos observaban la regla y la vida comun
necesidad de volverá restablecerle. No es la vez pri sin distincion alguna; sin embargo, no se han de com
mera que despues de haber sacudido el yugo de la re fundir los religiosos con estos clérigos-canónigos, pues
gla ha habido necesidad de volver á ella. aunque cada Orden religiosa tuviese su regla parti
Los claustros de que se encuentran rodeadas la ma cular no se les consideraba como canónigos, ni aun
yor parte de las catedrales son un monumento de la como eclesiásticos, ni ascendieron á los órdenes sagra
vida comun observada en otro tiempo por los ca dos hasta el año 380, siendo papa Siricio. El nombre
nónigos. de canonigo, en latin canonicus, viene de una palabra
griega que significa regla, pension, ó porcion y catá
CANONIGOS REGULARES. Se llaman asi los ca logo. Estas tres significaciones convienen igualmente
nónigos que no solo viven en comun y bajo una misma á los canónigos, porque estan inscritos en el catálogo
regla, sino que además se hallan ligados, ó por un yo de la iglesia á que son agregados, porque reciben una
to simpleó por votos solemnes, siendo unos verdade porcion ó pension anual en virtud de su título, y por
ros religiosos. Son varias las congregaciones que han que tienen reglas que seguir y obligaciones que des
formado, y llevan diferentes nombres. empeñar.
La mayor parte se establecieron á fines del siglo Del origen de los canonigos. La institucion de los
XI v en el XII. Como el clero secular se encontraba canónigos, del modo que los conocemos en el dia, es
degradado por la ignorancia y la relajacion de cos del siglo VIII, aunque muchos pretenden que trae su
tumbres, los eclesiásticos mas ilustrados comprendie origen de los mismos apóstoles.
ron que el único medio de remediar esta desgracia En efecto; se sabe por tradicion que despues de la
era la de imitar la piedad y virtudes que reinaban Ascension de Jesucristo, los apóstoles y los discípulos
entonces en los claustros. Por esta época aparecieron vivieron en Jerusalen en comun; que estos se trata
en Francia las congregaciones de san Rufo én Aviñon, ban mútuamente de hermanos; que los sacerdotes y
de san Lorenzo en el Delfinado, de san Ivo en Beau diáconos que ordenaron en diferentes villas, vivian
vais, de san Nicolás de Arose en Artois, de Mur - en comun de las limosnas y oblaciones de los fieles,
bach en Alsacia, de nuestro Salvador en Lorena, de bajo la obediencia de un obispo. Es igualmente cierto
san Salvador y de Letran en Italia, de san Victor en que á pesar de las persecuciones que afligieron á la
París, etc. De esta última salieron en el siglo XII los Iglesia en los tres primeros siglos, los sacerdotes y
canonigos regulares de la congregacion de Francia de los diáconos formaron entre ellos un colegio en cada
santa Genoveva. Véase GENov EvANos, VICToRINos, etc. villa; y si no podian de contínuo vivir en comun,
De esta suerte, en todos los siglos el esceso del des recibian todos los meses una porcion de las obven
orden y de la corrupcion origina la regularidad, y ciones de la Iglesia para su manutencion, que se lla
conduce á los hombres á la virtud, esto es lo que dis maba divisio mensurna, de donde les viene el nombre
gusta á los enemigos de la religion. Para qué sirve, de fratres sportulantes. El verdadero principio de los
dicen, establecer institutos, reglas reformas que colegios y comunidades de clérigos, llamados canóni
decaerán necesariamente por la inclinacion invenci gos, se puede tomar en el año 32 cuando se hizo la
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distincion de iglesias catedrales é iglesias particula repartiesen los bienes de la Iglesia en cuatro partes,
res. En las obras de S. Basilio y S. Cirilo, se dice que destinando la una para subsistencia del clero del obis
ya en su tiempo se servian del nombre de canónigos po; por lo cual se concede que aun no se observaba la
y canónigas en la iglesia de Oriente; pero en Occiden vida comun entre los canónigos. Paulo, diácono, cree
te comenzaron mucho despues á usarse. ¿ S. Crodegando, obispo de Metz, que vivia á me
El P. Tomassino sostiene en su tratado de discipli iados del siglo VII, en el reinado de Pepino, fue el
na eclesiástica, que hasta el tiempo de S., Agustin no que dió principio á la vida comun de los canónigos:
existia en el Occidente comunidad de clérigos que vi sin embargo, ya hemos visto que eran mas antiguos,
viesen en comun, y las que habia entonces subsis porque S. Crodegando no hizo mas que restablecer
tieron poco tiempo, hasta que se restablecieron en el esta costumbre en su iglesia. La razon que hay para
reinado de Carlomagno; sin embargo, Chaponel en su creer que fue el primero que instituyó la vida canoni
historia de los canónigos quiere probar que hubo cal es que hizo una regla para los canónigos de su
siempre comunidades de clérigos que no poseian nada iglesia, la cual fue adoptada y recibida por varios con
como particulares. De cualquier modo º est0 Sea, cilios de Francia, y confirmada también por la auto
se opina que S. Agustin, electo obispo de Hipona en ridad de los reyes. Es la mas antigua que tenemos de
391, fue el primero que restableció la vida comun de esta especie, y la mayor parte la sacó de la de S. Be
los clérigos en el Occidente, pero no los califica de ca nito, ¿? á la vida de los clérigos. En el pre
monigos; y desde aquel santo hasta el segundo conci facio se lamenta del desprecio en que estaban los cá
lio de Vaison, celebrado en 529, no se encuentra nones, la negligencia de los pastores, del clero y
ejemplar de que á los clérigos que vivian en comun se del pueblo. Se compone de treinta y cuatro artículos
les llamase canonigos, como los llama este concilio, y que contienen en sustancia, que los canónigos deben
despues el de Orleans. vivir todos en un claustro cerrado, durmiendo en dife
Clodoveo, que fundó en Paris la Iglesia de S. Pedro rentes dormitorios comunes donde cada uno tenga su
y S. Pablo, instituyó los clérigos que vivian en co cama; que no se les permita á las mugeres y á los le
mun sub canonica religione. S. Gregorio Turonense gos entrar en aquel claustro; que los criados ó sirvien
en el libro diez de su historia, y en el capítulo nueve tes, si fuesen legos, salgan de alli al instante que ha
de la vida de los Padres, dice que fue un tal Baudin, yan cumplido con su servicio; que los canónigos pue
obispo de Tours, el primero que estableció la vida co dan salir de dia; pero que se recojan todas las tardes
mun de los canónigos, hic instituitmensa canonicorum; en la iglesia á cantar completas, guardando despues
y esto era en tiempo de Clotario I, que reinaba á prin un silencio esactísino hasta el dia siguiente á prima;
cipios del siglo VI; aunque hay muchos ejemplares que se levanten á las dos para rezar mailines; que
anteriores de clérigos que vivian en comun; y asi, Bau el tiempo que hay entre maitines y laudes lo em
din no hizo otra cosa que restablecer la vida comun, pleen en aprenderlos salmos de memoria, ó en la lec
cuyo uso era mas antiguo, aunque no se habia obser tura y el estudio. El cabildo se reunia diariamente
vado en todas las iglesias: sin embargo de que aun despues de prima; se empezaba leyendo algun libro
despues de la institucion de las catedrales, obispo espiritual, y despues el obispo ó superior daba sus ór
tenia un clero agregado á su iglesia que se componia denes y corregia los defectos de los individuos. Des
de presbíteros y diáconos, los cuales formaban el con pues del cabildo se ocupaban todos en alguna labor de
sejo del obispo, que se llamaba presbiterio. manos, segun que les estaba prescrito. Los delitos
El concilio de Efeso escribió en el año 431 al clero mayores se sujetaban á la penitencia pública, y los
de Constantinopla y de Alejandría ad clerum popu de mas á unos ejercicios mas ó menos austeros, segun
lumque Constantinopolitanum, etc. haciéndole saber las circunstancias. Se castigaban arbitrariamente las
la deposicion de Nestorio. Tomo 3 de los Concilios, pequeñas faltas; pero ninguna quedaba impune. Des
pág. 571 y 57%. El papa Siricio condenó á Joviniano de Pascua hasta Pentecostés hacian dos comidas de
y sus errores en una junta de sus presbíteros y diáco carne al dia, escepto los viernes: desde Penteconstés á
nos, que llama él su presbiterio. Cuando el Papa Fe S. Juan les estaba prohibida la comida de carne, y
lix depuso á Pedro Chapheo, intruso obispo de Antio desde S. Juan hasta S. Martin, hacian dos comidas
quia, pronunció la sentencia en su nombre y el de los diarias con abstinencia de carne los miércoles y vier
que gobernaban con él la silla apostólica, es decir, nes. En el Adviento ayunaban hasta la hora de nona;
sus presbíteros y diáconos. Los concilios de aquellos y desde Navidad hasta cuaresma solo tres dias á la
primeros siglos están suscritos todos por el presbiterio se mana. En cuaresma ayunaban hasta vísperas, y no
del obispo, como se puede ver en los concilios de Afri podian comer fuera del claustro. El refectorio tenia
ca, lo n. 2 de los concilios, pág. 1202, y en Tomassino siete mesas: la primera era para el obispo que comia
disciplina de la Iglesia, parte 1.º, lib. 1.º, cap. 42. con los huéspedes y forasteros, para el arcediano y
El concilio IV de Cartago, celebrado en 398 man los que el obispo convidaba; la segunda para los pres
dó á los obispos que no decidiesen negocio alguno si bíteros, la tercera para los diáconos, la cuarta para
no en compañía de su clero. Ut episcopus nullius los subdiáconos, la quinta para los clérigos inferio
causam audiat atque praesentia clericorum suorum, res, la sesta para los abades y aquellas personas que
alioquin irrita erit sententia episcopinisi clericorum convidaba el superior, y la séptima para los clérigosdel
praesentia confirmetur. pueblo los dias de fiesta. Los canónigos, escepto el ar
S. Cipriano cumunicaba igualmente á su clero los cediano y algunos otros que estaban ocupados mas
negocios mas importantes, y aun los mas leves. San útilmente, tenian que hacer la cocina por turno. La
Gregorio el Grande, que ocupaba la silla apostólica comunidad estaba gobernada por el obispo y por el
á fin del siglo VI, y principios del VII, mandó que se arcediano y primiciero, á quienes el obispo tenia fa
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cultad de corregir y deponer si faltaban á su obliga gulares, que son los monges segun el contesto. El
cion. Habia un cillerero, un portero, un enfermero, concilio de Tours del mismo año distingue tres espe—
ademas los custodios ó guardas de las principales cies de comunidades: los canónigos sujetos al obispo,
iglesias del pueblo. A los canónigos enfermos se les otros sujetos á los abades, y los monasterios de reli
asistia con lo necesario si no tenian posibles: estaban giosos. Se conoce por algunos cánones de este conci—
en una habitacion aparte, y un clérigo inferior tenia lio que la profesion religiosa se iba aboliendo en al
cuidado de todos. Los que iban de viage con el obispo, gunos monasterios, y sus abades vivian mas como
ó solos, guardaban la regla de la comunidad en lo po canónigos que como religiosos. De esto resultó que
sible. Les daban un trage uniforme á todos ellos; y los aquellos monasterios se fueron secularizando poco á
jóvenes se ponian los hábitos de los ancianos luego poco, y en su lugar se instituyeron los cabildos de ca
que los desechaban; tambien les suministraban dine nónigos. En el concilio de Áix—la Chapelle del año
ro para comprar leña. El coste del vestido y el de la 816 se dispuso una regla para los canónigos, y otra
provision de la leña se sacaba de las rentas que la para las religiosas. En Hault, año de 816, el mismo
iglesia de Metz tenia en la ciudad y en el campo. Los concilio mandó que los canónigos no se apropiasen
clérigos que tenian beneficios se vestian á sus espen los muebles del obispo difunto como lo habian hecho
sas. Dábase entonces el nombre de beneficio á cierta hasta entonces. En el siglo X, ademas de los cabildos
renta conferida por el obispo. La regla no les imponia catedrales, se establecieron otros en los pueblos don
la obligacion de vivir en una pobreza absoluta; pero de no habia obispo, se les llamó cabildos colegiales;
les estaba prescrito por la misma el renunciar en favor y con el transcurso de los tiempos se han multiplicado
de la iglesia las tierras pertenecientes á ellos, conten— de modo que hay colegiatas aun en muchas ciuda—
tándose con el usufructo, pudiendo disponer de los des episcopales. Los concilios de Roma del año 1019
bienes muebles á su voluntad. Tambien disponian y 1063 mandaron que los clérigos volviesen á hacer
libremente de las limosnas de las misas que les daban; vida comun, porqué la habian abandonado los mas de
de las que recibian por confesar ó por asistir á los en ellos, y en efecto, se restableció en muchas catedrales
fermos, á no ser que espresamente las diesen para del reino, permaneciendo así cerca de un siglo; pero
la comunidad. Los clérigos que no pertenecian á ella, antes del año 1200 ya la habian abandonado en to
y vivian en el pueblo fuera del claustro, tenían que das partes, autorizando la reparticion de las preben
asistir los domingos y las fiestas á los nocturnos y á das entre los canónigos; y este es el estado actual de
los maitines en la catedral; asistian al cabildo y á la todos los canónigos seculares de las catedrales y co
misa, y comian en el refeclorio en la séptima mesa legiatas.
que estaba destinada para ellos. Los canónigos podian Del estado actual de los canonigos. En el dia for—
servirse de los clérigos inferiores con permiso del obis man unas corporaciones eclesiásticas, en las cuales ca
po, y estos quedaban sujetos á la correccion, y tenian da individuo tiene derecho á una cierta porcion de
ue asistir á los oficios en el trage de su Orden como rentas que en otro tiempo eran comunes: disponen de
clérigos esternos, pero no asistian al cabildo, ni co ellas á su voluntad, pero con la carga de asistir á los
mian en el refectorio. En fin, mandaba la regla que oficios divinos y servicio de la Iglesia. Los cabildos ó
los clérigos se confesasen dos veces al año con el obis las corporaciones eclesiásticas que hay, en las ca
po, una al principio de cuaresma, y otra desde la mi tedrales y colegiatas, tienen tres clases de empleos y
tad de agosto hasta el 1.° de noviembre, y las veces títulos. Las dignidades componen la primera; las pre
que quisieran hacerlo con él en el resto del año. Te bendas ó canonicatos la segunda, y las capellanías y
nian que comulgar todos los domingos y fiestas prin otros servicios inferiores la tercera. Aqui nos limi—
cipales, sino habia causa legítima que lo impidiese. taremos á tratar de los canónigos que forman la se
Esta era en sustancia la regla de S. Crodegando, que gunda clase. -

todos los canónigos abrazaron despues, asi como los De los requisitos necesarios para ser canonigo. Pri
monges de S. Benito. mero: ya hemos observado que segun la jurispru
Carlomagno manda en uno de sus capitulares del dencia de casi todos los tribunales del reino, confor—
año de 789, que todos los canónigos vivan segun su me en esto á la antigua regla diez y siete de la can
regla, por lo que algunos sostienen que su institu cillería romana, para obtener un canonicato en una
cion es poco anterior á él: lo cierto es que la cimen iglesia catedral se necesitan los catorce años cumpli
tó: véase el discurso de Fra-Paolo, pág. 65. Pasquier dos, y para el de una colegiata bastan diez; que el
dice, que no se conocia el nombre de canonigo antes concilio de Trento habia mandado que los canónigos
de ¿ ; pero es cierto que en el Oriente los de las catedrales tuviesen á lo menos la edad que se
colegios y comunidades de los clérigos empezaron requiere para el subdiaconado; que los concilios pro—
desde el siglo IV á tomar este título. San Basilio y San vinciales de llouen, de Reims, de Burdeos, de Bour—
Cirilo de Jerusalen son los primeros que usaron la voz ges y de Tours habian adoptado esta disposicion;
de canónigos y canónigas. El concilio de Laodicea, pero que no habiendo dado el rey el erequatur, los
que algunos dicen que se celebró en el año 314, y iribunales del reino conservaron la antigua jurispru
otros en 319, dice en su artículo 15 que nadie cante en dencia en este punto. Esto es tan cierto, qme el rey
la iglesia sino los canónigos chantres. El primer con cuando concede por regalía un canonicato á un cléri
cilio de Nicea, celebrado en el año 325, hace mencion go que no tiene la edad que se requiere, debe ma
muchas veces de clérigos canónigos; pero en el 0.- nifestar su voluntad particular, y declarar que se
cidente no se principió á usar esta voz hasta el si aparta de las costumbres recibidas en el reino. Los
glo VI. El concilio VI de Arlés, celebrado el año 813, autores refieren un decreto de 1358 por el que se de
en el canon sesto diferencia á los canónigos de los re clararon nulas la colacion V nombramiento real de
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una prebenda de la iglesia de Sens, hecha en favor de tes de ser admitidos despues de dos meses á lo mas de
un clérigo menor de catorce años. su toma de posesion, sopena de perder los frutos de sus
Hay, con todo, algunas iglesias que tienen reglamen beneficios sí se concluye el término. Esta es la dispo
tos particulares acerca de la edad que deben tener sicion del artículo 10 de la ordenanza de Blois, la
los canónigos. Segun está concebida la fundacion de cual se confirmó por el decreto del concilio de Tren
la santa capilla de Vicennes, los tesoreros, chantres, to, que está en el cap. 12, sesion 1 de reformatio
canónigos y vicarios deben ser presbíteros para ser ne, y se adoptó por los concilios provinciales de Ro
recibidos en ella, ó á lo menos poderse ordenar den uen, Reims, Burdeos y Tours. En algunos cabil—
tro del año. El capítulo de la Rochela, erigido y se— dos tienen que pagar los nuevos agraciados ciertos de
cularizado en 166, ha dispuesto en sus estatutos que rechos de entrada ó de patente, que consisten en una
no se confiriesen las dignidades mas que á personas suma de dinero, ó en dejar las rentas del primer año
que tuviesen veinte y cinco años cumplidos, y las pre de su prebenda. Antes ecsigian estos derechos rigoro
bendas á los que tuviesen veinte y dos. Para ser ca samente, y se repartian entre los canónigos antiguos:
nonigo de Paderborn es preciso tener veinte y un años, ¿ Urbano IV reprobó estas esacciones proscri
y haber estudiado en una universidad famosa de Fran iéndolas como simoniacas. Los concilios de Constan
cia ó de Italia por espacio de un año y seis semanas za y Basiléa, y la asamblea del clero de Francia,
consecutivas. Segundo: los canónigos no necesitan celebrada en Bourges en el reinado de Carlos VII, las
estar constituidos en los órdenes sagrados: esto es una prohibieron igualmente, y el concilio de Trento se
consecuencia necesaria de lo que acabamos de decir ralificó en la misma doctrina. Sin embargo, en la prác
en cuanto á la edad ; pero es preciso confesar que los lica se ha hecho una distincion de aquellas esaccio
deseos del concilio de Trento espresados en el modo de nes odiosas á la loable costumbre introducida de que
exigir que la mitad de los canónigos sean presbíteros, los nuevamente nombrados hagan una donacion en
y los otros diáconos ó subdiáconos, es conforme al favor de las fábricas para ornamentos y decoracion
espíritu de la Iglesia; y seria de desear que una ley de las iglesias. La bula del papa Pio V, espedida
general hiciese efectiva esta disposicion de dicho con en 1570 para la ejecucion y esplicacion del decreto
cilio y de otros provinciales. Segun la costumbre de del concilio de Trento, ha permitido conservar estas
lasiglesias de Francia, los canónigos que no estan costumbres: los concilios de Reims en 1583, y el de
ordenados, á lo menos de subdiáconos, no tienen en— Burdeos en 158, contienen las mismas disposicio
trada ni asiento, ni voto deliberativo en el cabildo; nes que han sido confirmadas por la jurisprudencia de
no pueden dar su voto para la eleccion de ningun be los decretos; pero es necesario observar que las do—
neficiado, ni nombrar con el cabildo para ninguna naciones hechas por un canónigo nuevo han de ser
clase de beneficios, á no ser que el nombramiento es— destinadas al servicio divino y empleadas en prove
té afecto á su prebenda en particular. Asi lo dispusie cho de los particulares, debiéndolas descontar de la
ron espresamente los concilios de Viena y de Trento, prehenda y no tomarlas del prebendado; y con estas
y se confirmó con dos decretos del parlamento de Pa condiciones las audiencias seculares no tienen dificul—
ris, el primero de 6 de junio de 155 , referido por tad en obligar al pago de los derechos de entrada á
Tournet, y el segundo de de octubre de 1727, que cualquier canónigo que lo rehusase. En algunos ca
se halla en las memorias del clero, año 1739, el cual bildos, los que son nuevamente nombrados antes de
declara nula las votaciones en que hayan deliberado ganar los frutos y disfrutar los honores y derechos de
los canónigos que no esten ordenados ín sacris. Ter sus prebendas, tienen que hacer lo que llaman la
cero: llay, algunos cabildos en los que deben hacerse Estancia y la Rigorosa. Entienden por estancia una
pruebas de nobleza para ser admitidos, como por residencia ó asistencia esacta y continua á todos los
ejemplo, el de los condes de Leon, el de Strasburgo y oficios, acompañada de una postura incómoda, por el
los de muchas iglesias de Alemania; otros exigen tiempo prefijado por los estalutos de los cabildos. Los
que sean hijos de legítimo matrimonio; de manera canónigos nuevos deben conformarse con las cos—
tumbres o usos del cabildo á que pertenecen, y no
que un bastardo no puede obtener canonicato en ellos
ni aun con dispensa , como por ejemplo, en los cabil se les dispensa el cumplir la estancia, la cual dura
dos de Vayeux y de S. Hilario de Poitiers. mas ó menos tiempo, y se ecsige ó se arregla con mas
De las formalidades que han de dbservarse en la to ó menos rigor en unos cabildos que en otros.
ma de posesion y para entrar en el goce de los canoni De los oficios y obligaciones de los canónigos. Aun
catos. Los canónigos tienen que observar las mismas que ya cesó la vida comun canonical en todos los ca
formalidades que cualquiera otro beneficiado en la to bildos, los cánones que se han hecho desde aquel
ma de posesion de sus prebendas. No nos detendre tiempo ordenan igualmente á los canónigos la mode
mos en referirlas por menor; solamente observaremos racion, la templaza y la frugalidad en las comidas;
lo que hay de particular en la de los canonicatos. Losel tener su espíritu alejado de las ocupaciones y en
actos de toma de posesion de los beneficios fundados tretenimientos del ¿ y el huir de las amistades y
en las iglesias catédrales y colegialas los autorizan compañías sospechosas; pero como estas obligaciones
válidamente los secretarios de los cabildos, sin nece son respectivas, y solo tienen por juez á su conciencia
sidad de los notarios apostólicos, mas que en caso de nos limitaremos á los oficios y obligaciones esteriores
rehusarlo el cabildo. à públicas que les pertenecen. La primera obligacion
Los agraciados con un canonicato ó prebenda, asi e los canónigos es la residencia y asistencia al ser
como los beneficiados, deben hacer su profesion de vicio divino en la iglesia en que estan inscritos.
fé en manos del obispo, de sus vicarios generales ó En otro tiempo era comun á todos los beneficiados;
provisores, y ademas deben hacerla en el cabildo an pero despues de la division de los beneficios en sim
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ples y con cura de almas, la residencia dejó de ser risprudencia de las audiencias ha sido mas severa en
una obligacion en cuanto á los beneficios simples. Los esta parte, mandando que la mitad de las rentas de
canonicatos nunca fueron comprendidos en esta cla las prebendas se distribuyese en porciones manuales.
se; y aunque se les permitió á los canónigos el tomar Asi resulta de un decreto del parlamento de Paris de
vicarios, no fue mas que para prestarles una asisten 10 de julio de 1546 para la iglesia de Orleans, y de
cia conveniente, y no para favorecer en ellos una ne otro, dado en los mejores tiempos de Troyes, de 12
gligencia intolerable. Las leyes eclesiásticas y secula de octubre, y otro de Clermon de 20 de octubre de
res han dado disposiciones para obligar á los canóni 1665, referidos en las memorias del clero.
os á la residencia; y no hay mas que consultar so Para repular como presentes á los canónigos, y que
¿ este asunto los decretos del concilio de Trento y tengan parte en las distribuciones que se hacen por
de los concilios provinciales posteriores que se han ce cada asistencia, deben asistir á lo menos á las tres
lebrado en el reino, las ordenanzas de Chateaubriand horas canonicales, que son maitines, misa y vísperas.
en 1551, las de Villerscoteres en 1557, las de Or— las distribuciones manuales que se hacen en los otros
leans y de Blois, el edicto de Melun en 1580, y el fa— oficios solo pertenecen á los que se hallan realmente
moso edicto de 1695, que han sido mantenidas en su presentes. Los estatutos que reputan como presentes
¿ por los parlamentos siempre que se ha presen á los que asisten á una de las tres horas canonicales
tado la ocasion. Conforme á estas leyes y á la juris son abusivos y han sido formalmente proscritos por
prudencia constante, los canónigos no pueden ausen muchos decretos, y especialmente por el que espidió
tarse cada año mas que tres meses, bien sean segui el parlamento de Paris en 6 de octubre de 1607 para
dos ó en diferentes ocasiones; debiéndose observar los las iglesias de Orleans.
estatutos del cabildo cuando ecsigen una residencia No se consideran presentes á las horas canónicas á
mas esacta; pero si los estatutos permitiesen á los los que asisten despues de principiadas; hay un canó
canónigos ausentarse mas de tres meses, serian abu nigo apuntador, es decir, que está encargado de ob—
sivos por mas antiguos que fuesen, aun cuando esten servar los ausentes y los que llegan cuando el oficio
autorizados con bula del Papa. se ha principiado, á saber: á Maitines, despues del
Sin embargo, se halla en Hildesheim, en Alemania, Venite evultemus, á la Misa, despues del Kyrie elei
que el obispo Luis el Benigno fundó un cabildo com— son, y á vísperas despues del primer salmo. Prag
puesto de veinte y cuatro canónigos capitulares, y de maticia sanct. tít. 11.
seis dignidades: el preboste, el dean y cuatro core— Son reputados como presentes y asistentes los canó -
píscopos, chori episcopi; cuando un canónigo ha cum nigos enfermos, de suerte que ellos siempre perciben
plido su estancia, que es de tres meses, le es permiti su parte, tanto de los frutos como de las distribucio
do ausentarse por seis años bajo diferentes pretestos, nes manuales, del mismo modo que si hubiesen asis
á saber: dos años peregrinandi causa, otros dos devo tido al coro. Los que estudian en las universidades fa
tionis causa, y los otros studiorun gratia. mosas, ó enseñan en ellas, se les reputa como pre
Los canónigos que se ausentan tres meses en el dis sentes para ganar los frutos de la prebenda, pero no
curso de un año quedan privados de los frutos de su para las distribuciones manuales. Cap. licet. eactr. de
prehenda á proporcion del tiempo que han estado au— pra bend. et dign. Se observa lo mismo con los que se
sentes; esta es la pena que los cánones imponen á los hallan ausentes en servicio de su iglesia ó del Estado,
beneficiados ausentes, cap. consuetudinem de clericis ó por cualquiera otra causa legítima, -

non residentibus in searto et Conc. Trid. ses. 2 de re—La tercera obligacion impuesta á los canónigos por
form. cap. 12. reglamentos de muchos concilios y ¿ los estatutos de
Cuando los estatutos de un cabildo obligan á los los cabildos, es la de asistir á los cabildos y asambleas
canónigos á una residencia contínua, se les concede, de su cuerpo. Hay dos clases de asambleas particula
sin embargo, algun tiempo para el arreglo de sus ne— res: las unas tienen por objeto la conservacion de la
gocios. Un decreto de 23 de mayo de 1669 señaló el regla, los estatutos, la disciplina, las costumbres y
término de un mes para un canónigo de Sens. correccion de las faltas; las otras conciernen á la ad
Debe observarse con Van-Espen y todos los cano— ministracion y direccion de los negocios temporales y
nistas, que los concilios y las leyes sujetan á los canó de los intereses civiles de los cabildos. Hay muchos
nigos que se ausentan mas de tres meses á la pérdida motivos justos y razones poderosas para obligar á los
canónigos á cumplir esactamente con las unas y las
de los frutos de sus beneficios, no justificando haber
sido mas corta su ausencia; pero se esceptúa de esta otras; en algunas iglesias distribuciones designa
á los que hayan estado ansentes menos de los das á estas asistencias, y ademas se les impone un
res meses, sin manifestar que han tenido causa legí castigo á los que faltan:
tima para ello. De los derechos de los canonigos. Solo hablaremos
La asistencia al servicio divino es mucho mas rigo aqui de los derechos que pertenezcan á cada uno de
rosamente prescrita á los canónigos por las leyes ecle los canónigos como individuo particular de un cabil
siásticas y seculares: por esta misma razon está tan do. Todo canónigo debe tener asiento en el coro de su
imperiosamente mandada la residencia. Para hacer la iglesia. Este puesto se arregla entre los canónigos
ley mas eficaz con respecto á la residencia, los cáno iguales en ordenacion , no por el dia de la toma de
nes han ordenado que una parte de los frutos y rentas posesion, sino desde el dia en que cada uno ha sido
de las prebendas se convierta en distribuciones dia instalado en el coro real y personalmente por el ca
rias repartidas en cada hora y parte del oficio divino; bildo; asi quedó establecido por un decreto del parla
las que solo ganarán los que asistan, y por consi mento de ¿ , fecha 14 de junio de 1671. La dife
guiente, quedan privados de ellas los ausentes. La ju rencia en los órdenes sagrados se tiene tambien en
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cuenta para el asiento en el coro entre los canónigos; el cabildo nombra ó presenta en cuerpo los beneficios
pero no hay cosa fija y estable en este particular, por que le corresponden, se hace el nombramiento ó pre
ue cada iglesia sigue sus costumbres, á las cuales
¿e conformarse. En unas, los canónigos que son sentacion en una junta particular ordinaria ó estraor
dinaria, y se resuelve, como todos los demas negocios,
presbíteros preceden á los canónigos mas antiguos de á pluralidad de votos, segun está establecido por la
un orden inferior: esta preferencia de los canónigos costumbre ó por los estatutos, para que se decida cual
presbíteros en algunas iglesias es la de colocarse frente quiera asunto en cabildo; mas los canónigos de órde
á las dignidades y personados. En otras, los canóni— nes inferiores no tienen en esto intervencion alguna.
gos medio prebendados que son presbíteros preceden Cuando el nombramiento de los beneficios se ha re
á los canónigos que solo son diáconos, ó de un orden partido entre los canónigos, designándolos á cada
inferior: en otras partes los semi-prebendados tienen prebenda en particular, es preciso hacer la distincion
su asiento despues de los canónigos de órdenes infe— de si este nombramiento trae su origen de la fundacion
riores. Cuando los canónigos de órdenes inferioresas misma de la prebenda, ó de la reunion que se haya
cienden al sacerdocio, ocupan el puesto que les cor hecho de algun beneficio á ella misma, o si por el con -
respondia desde el dia de su instalacion en algunas trario, deriva de concordatos y reparticiones hechas
iglesias; y en otras los canónigos que son presbíteros entre los canónigos. En el primer caso los canónigos,
y tenian la preferencia sobre ellos, continúan gozan aunque sean clérigos inferiores, tienen derecho án m
do de la misma. brar y presentar los beneficios anejos á su prebenda,
Los canónigos gozan, en segundo lugar, el derecho lo mismo que lo pueden hacer los eclesiásticos que
de tener asiento y rango en el cabildo Este se arre 0zan esta prerogativa, sin que les precise ascenderá
gla entre los canónigos por la época de su instalacion os órdenes sagrados. Pero en el segundo caso los ca—
y recepcion distintamente del asiento en el coro; pero nónigos de órdenes inferiores no pueden presentar los
no tiene efecto con los canónigos que son de órdenes beneficios de su nombramiento, porque estos en su
inferiores hasta que son promovidos á las órdenes sa origen estuvieron á la disposicion de los cabildos en
gradas. Este derecho lleva consigo el del voto delibe cuerpo, y los canónigos que nombran para estos bene
rativo, y está de tal suerte anejo á cada canónigo, que ficios, en virtud de reparticion, lo hacen como re
deben ser convocados todos á las juntas capitulares: presentantes de la corporacion, y lo mismo que los ca
si se tuviese alguna sin hacer la convocacion en la nónigos de turno y semaneros que deben tenerlas ór
ha ordinaria, uno tan solo que faltase podria opo— denes sagradas para egercer válidamente el derecho
nerse con razon á cuanto se hubiese dispuesto en su de nombramiento y presentacion de los beneficios por
ausencia, y la deliberacion seria nula y de ningun su turno. Véase CANoNIGo DE TURNo. Hay aun olro de
efecto por esta única razon, segun el acsioma de dere recho particular en varias catedrales y colegiatas, el
cho bastante conocido, de que «la ausencia de uno so cual consiste en la facultad de optará las prebendas,
lo que deba ser convocado y no lo haya sido, perju casas ó habitacioncs vacantes, dejando las que esta
dica mas que su oposicion si estuviese presente, y aun han poseyendo. Esta opcion se verifica cuando las
mas que la oposicion de algunos;» pero cuando la jun prebendas son desiguales, y en donde hay habitacio
la ha sido convocada en la forma ordinaria, la falta de
nes ó casas destinadas para los canónigos; y viene de
los que no quieren asistir no impide el curso, de los muy antiguo, porque ya se habla de ella en una de
negocios, y las deliberaciones hechas en su ausencia cretal de Bonifacio VIII, que se refiere en el cap. ...,
son válidas, siempre que hayan tenido el número de de consuetudinibus. Algunos canonistas la miran como
votos prescritos por la leyó la costumbre. Tampoco consecuencia de la avaricia de los antiguos canónigos
puede impedir las determinaciones del cabildo la di diciendo que es poco favorable; otros, por el contra
vergencia de pareceres, porque está prescrito que el rio, sostienen que está fundada en la razon, la jus
mayor número de votos gana y decide la votacion. ticia y la l,
porque en la distribucion de los
En tercer lugar, cualquier canonigo que tenga vo bienes entre personas de un mismo rango y unas mis
to y asiento en el cabildo, debe participar igualmente mas obligaciones, se les concede mas alivio y consue
de todos los derechos, frutos, ¿ honores y lo á los que han hecho mayores servicios, y á aque
emolumentos que pertenecen al cuerpo en comun. Se los que las enfermedades y la vejez se los hace mas
cuentan en esta clase los beneficios que son de la co necesarios. Sea de estas cosas lo que quiera, cuando la
lacion del cabildo: consiguiente á esto, y por un prin opcion de las prebendas vacantes está autorizada por
cipio general, los canónigos todos deben concurrirá la los estatutos y la costumbre inmemorial de un cabildo,
colacion y presentacion que el cabildo en cuerpo pue debe conservarse; pero solo tiene efecto en los casos
de y debe hacer; pero el modo de ejercer este dere de vacante ¿ muerte, ó por resignacion hecha•º len
- » ", •º- ,
cho es diverso, segun las costumbres de los cabildos. manos del cabildo ó del colador ordinario, y no r \º º

En unos el cabildo en cuerpo es el que nombra ó pre que acaecen por regalia y permuta, ó resignacion en
senta los beneficios que le corresponden; y en otros ca. manos del Papa y de sus de egados; esta es la doctrina
da canónigo en particular, segun su turno, que dura de Probo, de Perard, Castel; doctrina que se conforma
por espacio de una semana ó un mes, hace el nombra con las decisiones del parlamento de Provenza, refe
miento de losbeneficios que vacan en aquel tiempo. En ridas en el segundo tomo de las Memorias del Clero.
fin, otros cabildos han repartido los beneficios, no por Como en la opcion de las prebendas se trata solo de
el tiempo de las vacantes, sino entre ellos mismos, -
un beneficio y ventajas que son temporales, y que no
ciéndolos afectos nominalmente, y en particulará ca tienen relación alguna con los órdenes sagrados, para
da prebenda, nombrando y presentando los titulares que estos puedan darles algnn título de preferencia se
aquellos beneficios que les están designados. Cuando gradúa el derecho de elegir las prebendas ó habita
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ciones vacantes por la antignedad de la posesion, y gos están asignados á su iglesia lo mismo que los de
no por la superioridad de las órdenes que los canóni mas beneficiades.
gos tengan unos respecto de otros, á no ser que haya CANONIGOS DONCELES ó DOMICILIARIOS: ca
con este motivo alguna costumbre ó estatuto parli nonici domicellares. Antiguamente se daba este nom.
cular del cabildo, segun se decidió con el de S. Justo bre en algunas iglesias á los canónigos jóvenes que
de Leon por el parlamento de París, que se refiere en no habian ascendido á las órdenes sagradas. En la
el tomo segundo de las Memorias del Clero. En cuanto iglesia de Maguncia hay diez y ocho canónigos domi
al derecho de opcion y rango en el cabildo, en que por ciliarios, y el mas antiguo de ellos, con tal que ten
lo regular se atiende á la antigüedad de recepcion é ga veinte y cuatro años y esté ordenado in sacris, en—
instalacion, se suscitó la dificullad de saber si un ca tra en la primera vacante que ocurre de los veinte y
nonigo que ha estado en posesion de una prebenda y cuatro capitulares. Uno de ellos, puede tambien suce
la deja para aceptar otra, debe tomar el asiento que der en las vacantes por resignacion, pero solo tienen
le corresponde por su primera recepcionó por la segun derecho de elegir al arzobispo de Maguncia los que
da. Se resolvió esta duda por el consejo real en 29 de son capitulares. En la iglesia de Strasburgo hay tam
enero de 1715 que manda: que el canónigo que se ha bien canónigos domiciliarios.
lle en este caso debe ocupar el puesto y asiento que CANONIGO ADEFFECTUM, Hemos dicho ya que
tuvo en virtud de su primera instalacion. Esta reso— la pragmática y el concordato habian conservado al
lucion es conforme á los principios, y se debe seguir Papa el derecho de crear en los cabildos algunos ca—
en la práctica; porque en efecto, el que acepla una nonicatos para el efecto de poseer una dignidad en
segunda prebenda nó deja de ser miembro de la mis ellos cuando no pueden ser desempeñadas por los ca
ma Iglesia ni siquiera un instante; y seria poco de nónigos de la misma iglesia; y esta es una especie de
cente ceder el puesto que tenia adquirido á otros ca canónigos supernumerarios que se llaman canónigos
nónigos que tienen menos motivos para precederle. Es ad effectum, porque no tienen en efecto otro derecho
ta es la costumbre constante en todas las corporacio— que el de posesionarse en una dignidad vacante sin
nes. Los obispos se colocan, no por la antigüedad de la que les puedan oponer la razon de no ser canóni
posesion del obispado que tienen, sino por la anti gos prebendados.
güedad de la consagracion, que es la que les hace CANONIGOS FORANEOS, FORENSES. Son los
miembros de la corporacion episcopal. En las audien que no sirven en persona su canongía. Antiguamente
cias un consejero togado que toma plaza de consejero habia muchos de estos que tenian unos vicarios para
lego, ó viceversa, conserva el puesto que adquirió en que desempeñasen su obligacion. En esta clase se
su primera instalacion. Para completar lo pertene— pueden reputar los de algunos cabildos ó priores
ciente al artículo canonigo referiremos por orden al curas, que tienen canonicato en la catedral, y lo sir
fabético las diversas significaciones que tiene esta ven por un vicario perpetuo, como son los cabildos
palabra. de S. Victor, de S. Mártin del Campo, de S. Dionisio de
CANONIGOS EN ESPECTATIVA. Daban este título la Chartre, de S. Marcelo de Paris, que sirven los
anliguamente á los canónigos que los papas creaban en canonicatos anejos á sus casas por otros eclesiásticos
los cabildos con la cláusula de sub espectatione prae que se titulan altos—vicarios. Los priores-curas de
bendae, los cuales tenian el título y dignidad de tales, S. Hilarion y de la Concepcion de Orleans tambien es
con voto deliberativo en el cabildo, y sitio y asiento tan en posesion de un cánonicalo en la iglesia cole
en el coro. La iglesia galicana se opuso siempre á esto. giata de S. Aignan de la misma ciudad, y lo sirven
Segun nuestras liberlades y la pragmática sancion, por un vicario. Por esta razon nos figuramos que hay
título de colatione, S, item censuil, el Papa no puede en algunas iglesias una bolsa foránea distinta de la
bolsa comun del cabildo.
crear un canonigo sub espectatione futura praebendoe
en ninguna catedral nicolegiala, aunquesea consintién CANONIGOS HEREDITARIOS. Son algunos legos
á algunas catedrales ó colegiatas han corce
dolo el cabildo; y luego el concilio de Trento abolió
dido el título
del todo esta costumbre. Véase mas abajo CANóNigo mas bien, el de y los honores de canónigo honorario, ó
A DEFFECTUM.
canónigo ad honores. Asi es que está
admitido en el Ceremonial Romano el emperador co
CANONIGOS CAPITULARES. Son los que tienen mo canónigo de S. Pedro de Roma.
volo deliberativo en las juntas del cabildo; pero han El rey, por derecho de la corona, es el primer ca
de ser ó lo menos subdiáconos para ser capitulares. nónigo honorario hereditario de las iglesias de San
CANONIGOS CARDENALES, seu incardinnati. Hilario de Poitiers, de San Julian de Mans, de San
Eran unos clérigos que observaban la regla y la vida Martin de Tours, de Angers, de Leon y de Chalons.
comun, y estaban asignados á una cierta iglesia, lo Cuando entra en alguna de estas iglesias le presen
mismo que los presbíteros lo estaban á una parroquia. tan la muceta y la sobrepelliz. Algunos señores par
Leon IX, en el año 1051, los creó de estos en San ticulares tienen tambien dicho título en algunas igle
Esteban de Besanzon, y Alejandro Ill en la iglesia sias. Los duques de Berri lo eran de S. Juan de Leon.
de Colonia. Los hay todavia que tienen este título en Justo, baron de Tournon, era canonigo heredita
las iglesias de Magdeburgo, Compostela, Benevento, rio de San Justo de Leon. El señor de Toure y de
Aquileya, Ravena, Milan, Pisa, Napoles y algunas Villars, lo era de San Juan de Leon. Hervé, baron de
otras. Éste título, puramente de honor, por estar uni Danzy, de San Martin de Tours, y á este le han su—
do con el título de cardenal, no aumenta nada á la cedido el conde de Nevers, sus hijos y descendien
circunstancia de canónigo, porque habiéndose erigi tes. Los condes de Chatelus tienen el título de primer
gido en beneficioslos canonicatos en el dia, los canóni canonigo hereditario de la iglesia catedral de Auxer
 CAN 317 CAN
r

re, Tomó origen este derecho el año 123, en que colegiata de San Clou, porque una prebenda de aque
Claudio de Beauvoir, señor de Chatelus, arrojó á llos cabildos está unida á su casa. Véase lo dicho en
los bandidos que ocupaban la ciudad de Craban, la el artículo canónigos foráneos.
cual pertenecia al cabildo de Auxerre; sostuvo des— Cuarto: son tambien otra especie de canónigos ho
pues el sitio por espacio de cinco semanas, haciendo norarios los canónigos ad efectum. Véase lo dicho en
una salida para derrotar á los sitiadores, en la que el artículo CANóNIGos AD EFFECTUM.
hizo prisionero al condestable de Escocia, su general, Quinto: tambien se han visto canónigos honora
y entregó la ciudad al cabildo sin ninguna recom rios de otra especie cuando un cabildo confiere este
pensa, y en reconocimiento de estos servicios le con— título á alguna persona distinguida en la iglesia por
cedió el cabildo, para él y su posteridad, la dig su nacimiento, su dignidad ó su piedad, sin que aque
nidad de primer canonigo hereditario. El conde de lla persona haya sido jamás titular de una prebenda;
Chatelus tomó últimamente posesion de ella en la esta es una especie de agregacion espiritual que solo
forma siguiente: despues de haber prestado el jura hacen los cabildos por grandes consideraciones. El
mento llegó á la puerta del coro á la hora de ter— cardenal de Fustemberg, algunos años antes de su
cia en trage militar con sus botas y espuelas, reves muerte, fue nombrado canónigo honorario de san Mar
tido con una sobrepelliz, y encima de ella el lahalí tin de Tours.
con la espada, con sus guantes en ambas manos, la Sesto: la especie mas comun de canónigos hono—
muceta sobre el brazo izquierdo, y agarrado con la rarios es la de los veteranos: estos, habiendo servido
misma mano un halcon, y en la mano derecha un por espacio de veinte ó mas años en su iglesia, y he
sombrero bordado con pluma blanca; le colocaron en cho dimision del título de su beneficio, conservan el
el coro alto á la derecha entre el penitenciario y el título de canónigo honorario con el rango, asiento,
sochantre: ochenta y cuatro años antes habia sido entrada en el coro y algunos otros derechos útiles.
aditido su padre en la misma dignidad. Los seño— Es una recompensa justamente concedida á los que
res de Chailly, cerca de Fonteneibleau, tienen tam— han servido largo tiempo á la Iglesia, y continúan
bien un derecho muy parecido, que trae su origen edificando con su asistencia á los oficios divinos en
desde el año 175, en que Juan, señor de Chailly, cuanto les es posible.
dió al cabildo de nuestra señora de Melún todos los CANONIGOS JUBILEROS O JUBILADOS. Son
diezmos que tenia en aquel pueblo, y en recompensa los que sirven sus prebendas por espacio de cincuen
de esto los canónigos de Melún se obligaron á dar al ta años: se les repita como presentes, y disfrutan las
dicho señor y á sus sucesores, los señores de aquel distribuciones manuales. En la iglesia catedral de
pueblo, todas y cuantas veces vinieren á la ciudad de Metz se jubilan á los cuarenta años,
Melún, la distribucion de pan en la misma forma y CANONIGOS LEGOS. Son la mayor parte de los
manera que á los demas canonigos de aquella iglesia, canónigos honorarios y hereditarios, de los cuales .
para siempre, perpétuamente, etc. Segun lo acordado hemos hablado en los artículos respectivos. Sin em
por el cabildo, los señores de Chailly estan en pose-. bargo, hay algunos ejemplos particulares de canóni
sion de sentarse en la tercera silla alla á la derecha gos titulares que son legos y aun casados. En Tirle
del coro de nuestra señora de Melún. Han ocupado mont, en Flandes, hay una colegiata de canónigos
este sitio en diversas ocasiones, y los nuevos seño— que fundó un conde de Barlemont, en la que deben
res han sido instalados en ella la primera vez por el ser casados: llevan el hábito eclesiástico, mas no es—
cabildo mismo; entre otros Jorge de Esquiri, á quien tan ordenados; y los canonicatos valen cerca de cua
dió posesion de aquella el 20 de mayo de 1718 el trocientas libras, moneda de Francia. El dean tiene
chantre, de acuerdo con el cabildo, haciéndole reves que ser eclesiástico y no casado.
tir la muceta para darle la distribucion contenida en CANONIGOS MAYORES. Son los que tienen ma
sus títulos, cuando asiste á los oficios divinos; y el yores prebendas de una iglesia: los llaman asi, para
cabildo hizo cantar la antífona sub tuum praesidium, distinguirlos de los que tienen menores prebendas, á
y tocar el órgano. los que dan por esta razon el nombre de canónigos
Los canónigos honorarios son de varias especies: menores. Hay un ejemplar en el cabildo de san Omer,
los hay legos y eclesiásticos. en el que se distinguen las prebendas mayores de al
Primero: pueden considerarse como canónigos ho— gunas menores, que son de otra fundacion.
norarios los legos que gozan en algunas iglesias ca CANONIGOS MANSIONARIOS O RESIDENTES.
nonicatos hereditarios, de los cuales acabamos de Son los que sirven en persona á su iglesia, para
hablar. diferenciarlos de los canónigos foráneos que tienen un
Segundo: hay algunos eclesiásticos que por su vicario para servir su canonicato.
dignidad son canónigos honorarios natos de algunas CANONIGOS MENORES. Por lo que hemos di—
iglesias, aunque su dignidad sea estraña al cabildo. cho de los canónigos mayores se puede comprender
Por ejemplo, en la iglesia noble de Brioude, los obis lo que entendemos por canónigos menores. En la
pos de Puy y de Mende, con sus abades, son condes iglesia de Londres los habia para ejercer las funciones
nalos de Brioude; estos son canónigos honorarios. de los grandes canónigos.
Tercero: se pueden mirar en algun modo como CANONIGO 1N MINORIBUS. Se llama asi el que
canónigos honorarios algunas iglesias y monasterios no está constituido en los órdenes sagrados, y que
que tienen canongía en otra iglesia catedral ó cole— por lo mismo no tiene voto en el cabildo, y está pri
giata: como los canónigos regulares de S. Victor de vado de algunos derechos y honores.
París, que tienen facultad para entrar y hacer sus CANONIGOS MITRADOS. Los individuos de al—
funciones en la iglesia metropolitana de París y en la gunos cabildos tienen por una concesion particular
TOMO I. 6
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de los Papas la facultad de ponerse mitra, por lo que regulares. En Francia conocemos varias congregacío
los llaman canónigos milrados. En Francia estan en nes de canónigos regulares, de los cuales daremos
posesion de este privilegio los canónigos de la cate noticia en los artículos concernientes á ellas.
dral y de las cuatro colegiatas de Leon, y los canó CANONIGOS SECULARIZADOS. Se llaman los que
nigos condes de Macon, asi como en llalia el cabildo antiguamiente eran religiosos y canónigos regulares,
de Luca. y despues abrazaron el mismo estado que los canó—
CANONIGOS MONGES. Eran lo mismo que los seculares. Chopin habla de estos canónigos en
canónigos regulares: se habla de ellos en la vida de el libro primero de su tratado de minusaera politia.
Gregorio IV por Anastasio el bibliotecario, y en un CANONGO SECULAR. Se dice en contraposicion
antiguo pontifical de San Prudencio, obispo de Tro á canónigo regular, y tambien se entiende algunas
yes. Aun se conserva en algunas catedrales el cabildo veces por canónigos seculares á los canónigos legos y
compuesto de religiosos. -
hereditarios.
CANONIGO APUNTADOR. Es aquel canónigo que CANONIGO MEDIO PREBENDADO. Es el que
está destinado para anotar los que fallan y los que tiene una media prebenda.
llegan al coro despues que se ha empezado el oficio; á CANONIG0 ad sucurrendum. Era el título que da
saber, en los maitines despues del Veníte cacultemus; ban á los que se agregaban en calidad de canónigos
en la misa despues del I yrie eleison, y en las vísperas para tener parte en las oraciones del cabildo en el ar
despues del primer salmo. Le llaman apuntador por lículo de la muerte.
que marca con un punto en la lista de los canónigos CANONIGO SUPERNUMERARIO. Es lo mismo
á un lado de su nombre á los que faltan ó llegan lar que canónigo en espectativa, y asi se pueden llamar
de al coro. Otras veces, en vez de marcar un punto, los canónigos ad effectum.
pica con un alfiler los nombres de aquellos que fallan CANONGO TERCA R}O. Es una denominacion
o llegan larde; lo que es lo mismo. particular en algunos cabildos, con la cual designan
CANONIGOS REGULARES. Llámanse en el dia al que no percibe mas que la tercera parte de los fru
asi los que forman cabildo casi lo mismo que los ca los de una prehenda, asi como liaman en otras par—
nónigos seculares, y que asi como los religiosos, aña tes medio prebendados á los que no perciben mas que
dieron en lo sucesivo á la práctica de algunas obser la mitad de la renta de una prebenda repartida entre
vancias la solemne profesión de los tres volos de po doscanónigos.
breza, castidad y obediencia. Ya hemos dicho cuan CANONIGO DE TUltNO, SEMANERO ó INTABU
do hablamos d origen de los canónigos, que en la LADO. Estos tres vocablos designan la misma cosa,
primitiva lglesia vivian en lo comun todos los clérigos y significan un canónigo que está en turno para el
con el obispo; que S. Agustin, obispo de Hipona, es nombramiento de los beneficios , cuva colocacion ó
tableció en su misma casa episcopal una comunidad presentacion pertenece á su cabildo. Hemos dicho ya
de clérigos que servian á su iglesia, á los que dió una en el artículo CANóNigo, hablando de los derechos que
regla particular. Esta vida comun de todos los cléri pertenecen á cada uno en particular, que todo canónigo
gos-canónigos ha subsistido hasta el siglo Xll, unas tenia derecho de dar su voto en las juntas particulares
veces con fervor, otras con una relajacion tan consi ordinarias ó estraordinarias para nombrar y presentar
derable, que los concilios y santos obispos de aquellos mancomunadamente y en cuerpo los beneficios que
tiempos hicieron todos sus esfuerzos para mantener pertenecen al cabildo; pero en la mayor parte de ellos
la observancia entre ellos, y entonces no habia dis se dispuso, con el fin de evitar los manejos, intrigas y
tincion alguna, pudiendo llamarse igualmente canó— maniobras, que cada uno por su turno de semanas ó
nigos regulares; pero en lo sucesivo los colegios ó cor meses, presentase al cabildo los eclesiásticos mas á
poraciones de canónigos abandonaron la regla y la propósito paradesempeñar los beneficios que vacasen
vida comun enteramente, distinguiéndose los unos de en aquel espacio de tiempo. En virtud de esta dispo
los otros, por lo cual empezaron á llamarse simple sicion llamaron canónigo semanero ó de turno al que
mente canónigos los que renunciaron á la vida comun, estaba en el caso de nombrar los beneficios, dándole
y canónigos regulares los que se mantuvieron en su tambien el nombre de intabulado, porque tienen la
primitivo estado. Estos últimos hicieron el voto so costumbre los cabildos de formar una tabla para ins
lemne hácia el siglo XII, adoptando casi todos la re cribir en ella á los canónigos que tienen derecho de
gla de S. Agustin. El concilio de iletran, celebrado en volar, segun el orden de su admision é instalacion.
el año 1139, en tiempo de Inocencio II, les mandó que Ofrece eslo la cuestion de saber si los canónigos de
se sujetasen á ella; pero á pesar de este decreto del órdenes inferiores tienen derecho á ser inscritos en la
¿ se conservan otras varias reglas particulares. tabla, y gozar el derecho de presentacion en la se
Ivon de Chartres es el que se cree que instituyó los mana ó mes que les toque; pero la jurisprudencia está
canónigos regulares en Francia, que se consideran en contra de esta pretension, pues por un decreto del
con la cualidad de canónigos y de monges. Hacen lo parlamento de Rouen, fecha el 21 de junio de 1663,
mismo que ellos la emision de los votos solemnes de de que se hace mencion en el diario de palacio, se les
religion; no pueden heredar ni testar, y su comuni prohibió á los cabildos de su jurisdicion el conferir
dad les sucede por derecho; pero se diferencian de ningun beneficio de los que presentasen los canónigos
ellos en que son llamados por su estado á la cura de que no esten ordenados in sacris; y esta prohibicion
almas, y estan en posesion de obtener beneficios cu— es justa porque á los canónigos que no tienen volo,
rados, y que los monges solo tienen por objeto su pro ni rango, ni asiento en el cabildo, no se les puede
ia santificacion. Los cabildos de las catedrales de reputar capaces de nombrar para los beneficios per
zes y de Alelh se componen en el dia de canónigos tenecientes á él; por lo cual se declararia como un
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abuso la costumbre contraria, si la hubiese en algu— ralmente va precedida de un decreto de beatificacion.
nas iglesias. Véase esta palabra.
Los estatutos de los cabildos que contienen algun En los primeros siglos de la Iglesia, los mártires
reglamento para el nombramiento de los beneficios fueron los primeros á quienes los fieles rindieron un
que debe hacer el canónigo que está en turno no son culto solemne. Se levantaba un altar sobre sus se—
válidos, á no ser que por su antigüedad diesen á co pulcros, y se celebraban en él los santos misterios;
nocer que pertenecen á la constitucion del cuerpo en en esto consistia toda la ceremonia de la canonizacion.
algun modo: los que se hiciesen de nuevo ó tuviesen la Tenemos un ejemplo de esto en las actas del marti—
fecha algo reciente se declararian nulos, no estando rio de S. Ignacio, y en su carta de la iglesia de Es—
autorizados por algun despacho real registrado en for mirma, con motivo del martirio de S. Policarpo. Los
ma. Este es el principio en que se fundan los dos de— pueblos fueron, pues, los primeros autores del culto
crelos del parlamento de París, espedidos con fecha rendido á los santos, y la lglesia lo aprobó con
18 de abril de 1562 y 7 de agosto de 1625. TZOl.
Los canónigos no tienen derecho á nombrar para No obstante, los obispos juzgaron que era preciso
los beneficios que vacan en su turno: primero, si no observar muchas precauciones para impedir que se
están instalados en la lista que se debe formar de or— rindieran los honores debidos á la virtud, á hombres
den del cabildo: segundo, si no se hallan presentes que no los hubieran merecido. S.Cipriano mandó
en el parage en que está reunido el cabildo al tiempo que se hicieran informaciones esactas de los que
de formarse la tabla ad nominandum ad beneficia, habian muerto verdaderamente por la fé, que se le
porque así lo determinó el parlamento de París, el 18 enviasen sus nombres y circunstancias del martirio,
de febrero de 1724. Cuando vaca un beneficio en la á fin de no confundir con ellos á aquellos cuyo celo
semana ó mes de un canónigo, el que está en turno pudiera aparecer sospechoso. Epist. 37 y 79.
de nombrar no pierde su derecho al fin de su mes, á Mas adelante se creyó que debia rendirse el mismo
no ser que haya sobre esto algun estatuto ó costum— culto á los personages venerables, que sin haber su—
bre constante y antigua del cabildo. Puede egercer frido el martirio, hubieran edificado la Iglesia con
útilmente su derecho de nombrainiento, no escedien— su vida ejemplar. Mas la piedad muchas veces im
do del tiempo que se concede á los coladores y patro prudente de los pueblos, los errores en que incurrie
nos ordinarios. Asi resulta de la doctrina de un decre ron con este motivo, la negligencia de los obispos
to del parlamento de Metz, su fecha 31 de mayo de para comprobar las virtudes y milagros de aquellos
1601, y de otros dos del parlamento de París de 31 de á quienes se apresuraban á rendir un culto, obliga
mayo de 1591 y 27 de febrero de 17. Los del año ron á los soberanos ponlítices á reservarse este jui
de 1601 y de 17 hablan del caso de un canónigo á cio. El primer ejemplo de una canonizacion solemne
quien no se lo impidiese ningun estatuto del cabildo; hecha por el Papa, fue á fines del siglo XI. Vease el
el de 1691, por el contrario, habla del caso en que por antiguo Sacramentario por Grandcolas 1.° parte,
un estatuto particular pase el nombramiento de un página 385. -

beneficio al canómigo que se halla en turno, cuando el Los protestantes han hecho todo lo posible por
que estaba de semana al tiempo de la vacante se des poner en ridículo la canonizacion de los santos; pero
cuidó en proveerlo. Si falleciese el canónigo de turno hubieran debido decirnos al menos lo que podia ha
en la semana ¿ le corresponde sin haber nombrado cer la Iglesia para evitar los pretendidos abusos que
para los beneficios que han vacado en aquel tiempo, la echan en cara. Ha podido ó debido impedir á los
no pasa el nombramiento al que le sigue en turno, si pueblos el que respetasen la memoria de los servido
no que vuelve al cabildo, de quien es dimanado este res de Dios, de quienes se habian admirado las vir
derecho, pues el canónigo difunto era solo un repre tudes durante su vida? Este sentimientn era natural;
sentante ó especie de apoderado en el particular. lo ha sido siempre y lo será; ha reinado entre los
judios lo mismo que entre los cristianos. Eccles. c. .
CANONIGOS DE TRECE MARCOS DE PLATA. y sig. Los protestantes dicen, que una cosa es respe
En un manuscrito de la iglesia de Rouen se habla de tar la memoria de los santos, y otra rendirles culto;
ellos; acaso se les pudo dar este nombre porque la nosotros los decimos, que supuesta la creencia de la
renta de sus canonicatos se habia fijado entonces en inmortalidad de las almas y de la felicidad elerna de
trece marcos de plata. Segun el P. Pommeraye, en su los santos, ha sido imposible creerlos felices en el
Historia de la catedral de Rouen, pág. 522, no hubo cielo y penetrados del amor divino, sin persuadirse
jamás canónigos de trece marcos; pero hay todavia que no está muerta en ellos la caridad, que se
cuatro canónigos de quince marcos que se sienlan con interesan en la salvacion de sus hermanos, qne in
los capellanes. terceden por nosotros y que es útil invocarlos. Era
preciso toda la pertinacia de los protestantes para
Canonizacion de un santo. Decreto por el rechazar una consecuencia tan palpable. Véase
cual el soberano pontífice declara que tal hombre prac CULTo.
ticó las virtudes cristianas en un grado heróico, y En tal suposicion los pastores de la Iglesia debie
que Dios ha obrado milagros por su intercesion, ya du ron dejar á discrecion de los pueblos la eleccion de
rante su vida ó ya despues de su muerte. Por consi los personages que merecian ó no ser reputados co
guiente, juzga que se le debe honrar como á un santo, mo santos, más bien que reservarse este juicio?
permite esponer sus reliquias á la veneracion de los Desde los primeros siglos fue preciso discernir los
fieles, invocarle y celebrar el santo sacrificio de la mi verdaderos mártires de los falsos: los mismos pro
sa y un oficio en honra suya. La canonizacion gene testantes sostienen que en los siglos noveno, undéci
 *
CAN (320 CAN

mo y duodécimo de la Iglesia, los pueblos cayeron Cámatico. V. CANTo ECLEslÁSTICo.

en errores y escesos enormes respecto á los hom
bres reputados por sanlos; por lo tanto, fue preciso, Cántico de los cánticos. Libro sagrado,
para evitar los abusos, el que les Papas se reserva llamado asi por los hebreos para espresar su esce
ran los procesos de la canonizacion de los santos, lencia. Se le atribuye á Salomon, cuyo nombre lleva
pues que es un objeto que interesa á la Iglesia uni en el lesto hebreo y en la antigua version griega.
versal. Cuando nuestros adversarios se quejan del Los lalmudistas decian que era de Ezequías; pero
demasiado número de santos canonizados, se oiria esta opinion no fue seguida por los demas rabinos.
que se incomodan porque hubo muchas almas vir Se dice en la Escritura que Salomon habia com
tuosas en el mundo, que merecieron servir de ejem puesto cánticos, asi como David, y el nombre de Salo
plo á las demas. -
mon se encuentra en muchos pasages de éste.
No es posible llevar mas allá la esactitud en el ecsá Al examinar desde luego el sentido literal, ó mas
men que se hace en Roma de , la vida, acciones y bien, gramatical de este cántico, los críticos han for—
milagros de un personage cuando se trata de su ca mado de él diversas opiniones: unos han dicho que
nonizacion. Es facil convencerse de esto por la obra era una obra puramente profana, en la que Salo
que el Papa Benedicto XIV escribió sobre esta mate— mon celebró sus amores con la hija de Faraon, rey
ria. Creen los católicos con razon que un juicio, de Egipto, que era la mas querida de las esposas.
dado con tantas precauciones, no puede estar sujeto Esta era la opinion de Teodoro Mopsuesteno, que
á error; que en una circunstancia tan importante consideraba esta obra como peligrosa para las cos
Dios concede á su Iglesia la asistencia que la ha pro tumbres; es tambien la idea que tienen de ella los
metido hasta el fin de los siglos. anabaptistas. Los judios prohibieron su lectura an
Una de las acusaciones que los incrédulos de nues tes de la edad de treinta años, aunque por otra par—
tros dias repiten con mas frecuencia, es que la Igle te la consideraban como un libro inspirado. Otros
sia ha colocado en el número de los sanlos á hom han pensado que era un epilalamio, un poema des—
bres inútiles que no hicieron ningun servicio al tinado á ser cantado en las bodas; han creido distin
mundo y que con su celo falso alteraron la tran guir en ella siete partes de égloga, que correspon
quilidad, príncipes que no ¿ mas que las den á los siete dias que duraban las bodas de los
virtudes del claustro, ó que fueron perseguidores de antiguos. Esta fué la opinion de Bossuel, en el co
los que no pensaban, como ellos. Mas los filósofos mentario que hizo de este libro y la de Lowth , de
que conocen tan mal la virtud, son malos jueces del sacrá poes. Hebreor. prae lect. 30 y 31.
mérito de los santos: un hombre no es inútil al mun— Algunos comentadores, preocupados con estas
do cuando en el silencio de la soledad emplea su ideas, han hecho de este cántico traducciones de
tiempo en alabar á Dios, orar por sus hermanos, masiado libres y capaces de alarmar el pudor; como
practicar la mortificacion, la obediencia y el des— Besa, Caslalion, Grocio, y un célebre incrédulo de
prendimiento de todas las cosas. Estos ejemplos que nuestros dias; otros han tratado de hacer notar los
son conocidos tarde ó temprano, son muy útiles para pasages que segun nuestras costumbres parecen de
dará entender á los hombres en qué consiste la ver masiado licenciosos, y acriminan á la Iglesia calóli
dadera felicidad; esta leccion vale mas y produce ca porque ha colocadó algunos trozos de este poema
mas efectos que las disertaciones de los filósofos. en el oficio divino. Por lo demas todos convienen
Cuando los santos están revestidos de una dignidad que en cuanto á obras profanas, ninguna, hay mas
ue les dá un rango en la sociedad, y les impone el agradable que esta; que se encuentra en ella un fue
¿ de velar sobre la conducta de los demás, es go, una delicadeza y una variedad de imágenes ini
imposible que sus lecciones y conducta no desagra mitables; es una pintura sencilla de las antiguas
den á los hombres viciosos, y que no esperimenten costumbres del Oriente. Sin embargo, uno de nues
alguna contradiccion. Su dulzura será viluperada co tros literatos modernos, no ha encontrado nada de
mo una débil condescendencia: su firmeza pasa por maravilloso en ella, segun su opinion, si se esceptuan
ambicion de dominar, por inquietud ó dureza de ca— algunas imágenes campestres bastante agradables;
rácter; se les acrimina por sus mismas virtudes, lo demas nada tiene de subline ni de elocuente.
«Todos aquellos, dice S. Pablo, que quieran vivir Mas todas estas opiniones han sido refutadas por
»piadosamente, segun Jesucristo, sufrirán persecu— un crítico muy hábil en las lenguas orientales. El
» cion; mientras que los hombres malvados y seduc sabio Michaelis, en sus notas sobre Lovvth, sostiene y
»tores progresarán en el mal, y arrastrarán á los prueba que el objeto del cántico, de Salomon no es
» demas en sus errores». II Timot. c. 3, y, 12 y 13. pintar, ni el amor licencioso de dos personas libres,
Esta es la historia de todos los siglos. ni el de dos jovenes esposos en la época de sus bo
Cuando los príncipes han empleado en prácticas das, sino el amor castísimo de dos esposos unidos ha
de piedad el tiempo que otros lo dedican á los pla ce mucho tiempo. Es verdad que esta idea no está
ceres tumultuosos, dispendiosos, y con frecuencia es de acuerdo con nuestras costumbres. pero es muy
candalosos, no vemos qué han perdido los pueblos análoga á las de los orientales, entre los cuales las
en ello. Por lo que respecta al nombre de perse— mugeres, siempre encerradas, no ven á sus maridos
guidores que se d á los soberanos que reprimieron cuando quieren, y no tienen ninguna sociedad con
la audacia de los hereges y de los incrédulos, no de los demas hombres, estando sujetas por otra parte
be imponernos el abuso de una palabra; debieron á todas las pasiones que inspiran el clima, la clau
castigar á los que corrompian las costumbres y des sura y la poligamia. Observa que esta falta de socie
ruian los principios de virtud. W. SANTo. dad entre los dos sexos es causa de que los hom
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bres se espresen con mas libertad en las conversa á todas sus partes un sentido seguido y análogo á este
ciones que lienen, ya entre sí, ya con sus esposas; sentido genéral. Convenimos en que ninguna de estas
que por su parte las mugeres no creen ofender el esplicaciones puede dar autoridad, porque cada uno
pudor con la sencillez de sus espresiones; esta licen es libre de dar la suya; así es que jamás han hecho
cia en el lenguaje no hace mas impresion que la des— uso de este poema para probar ningun artículo de é.
nudez casi completa de los dos sexos tan comun en Mas como es muy esencial el separar del entendi
estos mismos climas. miento de todos aquellos que le leen toda idea profa
Por todo lo cual demuestra, por una parte, la na, no se debe vituperar á los que buscaron una lec
injusticia del escándalo que los censores de los libros cion de piedad en cada capítulo y versículo. Por lo
santos han querido deducir de este cántico y de mu— mismo habria prevencion en censurar á los que lo
chos pasages semejantes del profeta Ezequiel; por han aplicado no solo á Dios y á la Iglesia, sino á Je
otra, la severidad de los traductores, que han pa— sucristo y al alma fiel. Aun cuando este no fuese el
sado toda la energía del testo hebreo á la len sentido mas natural del testo, por lo menos siempre
gua de los pueblos, cuyas costumbres y usos no son es una leccion util para la piedad; y por mas que di
iguales á los de los antiguos orientales. gan nuestros sabios críticos protestantes es el mejor
Este crítico juicioso prueba con ejemplos lo que fruto que pudiéramos sacar de la lectura de los libros
dice. Por el testimonio del viagero Chardin cita un santos. Poniendo este método en ridículo, y ateniéndo
poeta asiático, muy grave por otra parte, que ha tra se escrupulosamente á las reglas de gramática, de
tado las malerias mas sublimes de teología efectiva lógica y de crítica, los protestantes casi han conver
bajo el velo de la alegoria, y en un estilo que pare tido la Escritura Santa en un libro puramente profa
ceria ser del libertinage mas grosero. Los doctores no, como si Dies nos lo hubiese dado para aumentar
judíos y los Padres de la Iglesia no han ido tan desa— nuestros conocimientos curiosos, y no para inclinar
certados al considerar el cántico de Salomon como un nos á la virtud. No es asi como nos lo representa san
poema alegórico, y no como una obra profana. Los Pablo. «Toda Escritura divinamente inspirada, dice,
primeros, bajo la imagen de la union conyugal, en » es útil para enseñar, reprender, corregir é instruir
tendieron la alianza de Dios con la sinagoga. Ezequiel » en la justicia, para hacer un hombre de Dios per
y otros profetas la representaron de la misma manera »fecto y egercitado en todas las buenas obras». ll.
y este es el sentido que ha seguido el parafrasto cal Timot. c. 3, y. 16. De qué serviria el cántico de Salo
deo. Los Padres se han fundado mas descubriendo en mon, si nos atuviésemos solamenle al sentido que
ella la alianza perpétua é indisoluble de Dios con la parece en él mas literal?
Iglesia cristiana, pues que en muchos pasages del
nuevo Testamento, la Iglesia es llamada la esposa de Canato eclesiástieo. En lodos tiempos y en
Jesucristo; él mismo representa bajo la figura de una los pueblos mas groseros ha formado el canto par
boda el establecimiento de esta santa sociedad. Math. te del culto divino, y es muy probable que los pri
c. 22, y, 2; c. 25, y 1; Apoc. c. 19, y . 7. etc. En es— nmeros cánticos se dedicaran á celebrar los beneficios
te sentido es en el que se han colocado en el oficio di de Dios. El reconocimiento, la alegria por recibir
vino algunos trozos del cantico, y se ha hecho con to continuamente nuevos dones de su providencia, la
da eleccion y precauciones convenientes. Los minis— dulce emocion que produce en los corazones la reu
tros de la Iglesia, acostumbrados á no ver en este li nion de los hombres al pié de los altares, no podian
bro sagrado mas que un sentido espiritual y alegóri menos de manifestarse por medio de cánticos. Aun—
co, se hallan al abrigo de loda idea profana, contra que la Escritura Santa no habla de este uso en la
ria á la castidad y á la piedad. historia de los patriarcas, no dudamos que siguieran
Si el literato moderno que ha tratado de deprimir en esto como los demas hombres, el impulso de la
la composicion de este antiguo poema, hubiese con naturaleza. -

sultado á Lovvth y Michaelis habria conocido mejor No nos pertenece hablar de los cánticos de los pa
la energia, las alusiones y las bellezas, y lal vez ganos: pervirlieron su uso, y en lugar de celebrar con
hubiera reformado su juicio. Por otra parle, los que sus canlos al soberano autor de la naturaleza, canta
han aplicado á las siete edades de la Iglesia los siete ban las aventuras escandalosas y los crímenes que
dias durante los cuales se celebraban las bodas no lle atribuian á las falsas divinidades: los delirios de la
van razon, porque en el cántico no se trata ni de mitología no fueron conocidos de los pueblos sino por
bodas ni de distincion de dias. Biblia de Aviñon, l. 8, los cantos de los poelas; era una escuela de vicios y
p. 399 y sig. corrupcion.
Las objeciones que se han hecho contra la inspi Desde que los hebreos formaron un cuerpo de na
racion de este libro no son dificiles de resolver. Se cion supieron ensalzar con sus acentos las alabanzas
admiran desde luego de que no se encuentre citado del Señor. Quién no conoce los cánticos sublimes de
en el nuevo Testamento; pero tambien hay otros li Moisés, de Débora, de David, de Judith y de los pro
bros del antiguo que tampoco lo estan. Añaden que no felas? Tienen por objeto no solo alabará Dios por los
se encuentra en él el nombre de Dios; poco importa, beneficios prodigados á todos los hombres en el orden
cuando el objeto del poema es Dios mismo. de la naturaleza y por los favores particulares que
Aunque estimemos en mucho la erudicion y pers habia concedido á su pueblo, sino tambien para im
picacia de Lovv th y Michaélis, no podemos suscribir plorar su misericordia y pedirle la abundancia desus
á la crítica que han hecho de los Padres y de los co dones en el orden de la gracia. No se limitó David á
mentadores, que no contentos con sostener que todo componer salmos y cánticos, sino que ademas esta
el cántico es místico y alegórico; han tratado de dar bleció coros de cantores y músicos para alabará Dios
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en el tabernáculo ; exhorta á los pueblos á alabar al sacerdotes en honor del Cordero. c. 5 y 9. Los cristia
Señor con los acentos de sus voces y el sonido de los nos á quienes Plinio preguntó sobre lo que pasaba en
instrumentos; Salomon , su hijo, hizo observar el sus asambleas, le dijeron que se reunian el domingo
mismo uso en el Templo. para cantarhimnosáJesucristocomoáun Dios, Plinio,
Las diferentes disertaciones compuestas con el ob 10, epist. 97. Sócrates en su historia eclesiástica, lib.
jeto de darnos á conocer la música de los hebreos y 6, c. 8, dice que S. Ignacio obispo de Antioquia, es
los diversos instrumentos de cuerda y de viento de tableció en su iglesia el uso de cantar á dos coros cán
que usaban, no nos han instruido mucho. Solo sa ticos y salmos, y que fué imitado por las demas igle
bemos por los libros santos que Moisés hizo cons ¿ S. Ignacio vivió poco tiempo despues de los após
toles.
truir trompetas de plata para tocar durante los sacri
ficios solemnes; que los levitas estaban encargados de Cuando los arrianos negaron la divinidad de Jesu
cantar y tocar los instrumentos en el tabernáculo, y cristo se les opusieron los cánticos de los fieles, que
despues en el Templo; que en el tiempo de David y Sa desde el origen de la Iglesia atribuian á Jesucristo es
lomon habia veinte y cuatro bandas de música que la augusta cualidad. Eusebio t.5, c. 28. Pablo de Sa
iban alternando. Es de presumir que esta música no mosata hizo suprimir estos cánticos en su iglesia, por
era la misma que usaban los judios en las bodas, en que en ellos se condenaban claramente sus errores.
los festines y en los regocijos profanos que era mas Ibidl. 7, c. 30. S. Agustin compuso espresamente un
grave y magéstuosa. salmo muy largo para prevenir á los fieles contra los
Mr. Fourmont en las Mem. de l'Academie des Ins— artificios de los donalistas. Asi que en todos tiempos
criptions, ha tratado de probar que en los salmos y la Iglesia cristiana ha profesado su creencia por las
cánticos de los hebreos se encontraban dicciones es— oraciones y culto esterior, y con frecuencia es este
trañas, espresiones poco usadas entonces, inversio un manantial donde se la encuentra con mas faci
nes y transposiciones; que el estilo de estas obras co— lidad que en las discusiones teólogicas.
mo el de nuestras odas es mas sublime, pomposo y Los valentinianos, basilidianos, bardesanitas, los
enérgico; que se distinguen en ellas estrofas, repeti maniqueos y otros hereges compusieron himnos y
ciones, medidas, y diferentes clases de versos y aun cánticos para difundir con mas facilidad sus errores.
de rima. Lowth, de sacra poesi Hebrarorum, y Mi Para remediar este abuso, el concilio de Laodicea,
chaelis en sus notas sobre esta obra, sostienen lo mis can. 59; prohibió leer ó cantar en las iglesias salmos
mo, y lo demuestran con muchos ejemplos. Nuestros compuestos por particulares, y mandó que se limi
mejores poetas se han dedicado con buen éxito á tra laran á la lectura de los libros santos.
ducir en verso francés un gran número de salmos y San Agustin refiere la impresion que hicieron so
cánticos de la Sagrada Escritura. bre él los cánticos y salmos que oyó cantar en la igle
Entre los hebreos, asi como en otras partes, los cán sia de Milan Confess. l. 9, c. 6. «Cuántas lágrimas
ticos no eran siempre la espresion de la alegria; se » derramé, dice, por la violenta emocion qne esperi
usaban tambien para deplorar los acontecimientos » menté cuando oí en vuestra iglesia cantar los him
tristes y lúgubres: dígalo el cántico de David sobre »nos y cánticos en vuestra alabanzal Al propio tiem
la muerte de Saul y de Jonatás, II. Reg. c. 1 , y las »po que esos dulces sonidos herian mis oidos, vuestra
lamentaciones de Jeremias sobre las miserias de Je » verdad penetraba por ellos en mi corazon, y esci
rusalen. Estos cánticos lúgubres ó elejías agradaban »taba en mí los movimientos de la piedad». Los mi
tanto á los hebreos, que hicieron de ellas colecciones; sioneros mas esperimentados nos aseguran de la efica
mucho tiempo despues de la muerte de Josias se re cia de los cánticos espirituales para inclinará las gen
petian los gemidos de Jeremías sobre el fin trágico de tes del campo á la virtud y retraerlas de los cantos
este rev. II. Paral. c. 35. profanos. -

Desde el origen del cristianismo el canto fue ad Como no conviene que el canto religioso sea seme
mitido en el oficio divino, sobre todo cuando la Igle— jante al que espresa pasiones desordenadas, la Iglesia
sia tuvo libertad para dar á su culto el brillo y pom cristiana ha velado siempre para que el canto de la
pa convenientes, y fue autorizada por las lecciones de liturgia y del oficio divino fuese grave y magestuoso,
Jesucristo y de los apóstoles. El nacimiento de este espresase la piedad, y no una loca alegría; por esto se
divino Salvador fue anunciado á los pastores de Belen llama canto-llano para distinguirle de la música de los
con los cánticos de los ángeles; conocidos son los de teatros y de las canciones profanas. Los Padres de la
Zacarias, los de la Virgen Santísima y del anciano Iglesia mas respetables, como S. Juan Crisóstomo, San
Simeon. Jesucristo, durante su predicacion, aprobó el Gerónimo, S. Ambrosio y S. Agustin pusieron la ma
vor atencion en desler rar de las reuniones cristianas
que las turbas del pueblo fuesen delante de él acompa
ñándole en su entrada en Jerusalen, y cantando Ho los cantos blandos, afeminados y la música demasiado
sanna, bendito sea el que viene en nombre del Señor, alegre, que no sirve mas que para agradar al oido y
salud y prosperidad al hijo de David, continuando de ahogar los sentimientos de piedad. Los donalistas
esta suerte hasta el Templo: reprendió á los fariseos echaban en cara á los católicos la manera demasiado
porque se indignaban de estas demostraciones de ale grave con que cantaban los salmos; S. Aguslin por
ria. Math. c. 21, y. 9, 15. S. Pablo exhorta á los fie el contrario, acusa á los donatistas de espresar con
es á que se esciten mútuamente á la piedad con him sus cantos los trasportes de la embriaguez, mas bien
nos y cánticos espirituales. Ephes. c. 5, y. 19, Coloss. que las afecciones piadosas. Ep. 35.ad Januar. n. 34
c. 3, y 16. En el cuadro que nos presenta de la litur San Ambrosio, que arregló el canto de su iglesia
gia primitiva el Apocalipsis, se habla de un cántico en un tiempo en que subsistian aun los teatros de los
enlonado delante del altar por los ancianos ó por los paganos, evitó con el mayor cuidado imitar su me
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lodía; S. Gregorio, que hizo lo mismo en la Iglesia de mirar que en el siglo VIII se empleasen diez años en
Roma, en un siglo en que no existian ya estos teatros, la instruccion de la primera juventud. 2." Si S. Gre
no encontró ningun inconveniente en introducir en ¿ se equivocó en cuidar de los primeros estudios
el canto eclesiástico aires mas agradables, porque ya e los clérigos, es preciso tambien vituperar á Carlo
no podian traer á la memoria nada peligroso. De Magno que no se desdeñó de esto mismo y al rey Ro
aquí provino la distincion entre el canto ambrosiano berto que se ocupó de ello; no obstante se les conside
y el canto gregoriano; el primero era mas grave, el ra como los restauradores de las letras y no como á
segundo mas melodioso. No tienen razon los que dicen los autores de la barbarie. Será igualmente preciso
ue S. Ambrosio fue el autor del canto-llano; antes censurar á los antiguos filósofos que consideraron á la
¿ él, lo habia establecido S. Atanasio en la iglesia de música como una parte de la filosofia; la música, pues,
Alejandría, poniendo en uso, dice S. Agustin, un de aquellos tiempos no era superior al canto- llano
canto de los salmos que se asemejaba mas el recitado del dia. Mr. Burette, en sus Investigaciones sobre la
de los discursos, que á un verdadero canto. Confess., música de los antiguos, ha probado que se puede
libro 10, c. 33, Carlo-Magno, que observó que el can aprender en el dia en seis meses lo que entonces
to galicano era menos agradable que el de Roma, exigia un estudio de diez años En lugar de viluperar
envió á esta ciudad clérigos para aprender el canto á los grandes hombres de los primeros siglos los es—
romano, y lo tradujo tambien en las Galias. fuerzos que hicieron para destruir la primera corteza
Los PP. de la Iglesia de que hemos hablado, los de la barbarie, es preciso bendecirlos, porque se baja
fundadores de Ordenes monásticas, tales como S. Be ron hasta tomarse los cuidados mas minuciosos; si no
nilo, S. Bernardo y otros, recomendaron muchas ve— se los hubiesen tomado, no sabriamos en el dia lo que
ces la atencion, el respeto y la modestia el recogi sabemos.
miento y la devocion con que deben cantarse en el Aludiendo á estas antiguas escuelas romanas llama
coro las alabanzas del Señor. Siempre que se han se— el pontifical schola á los clérigos que acompañan al
parado del antiguo espíritu de la Iglesia, y que han obispo y le asisten en sus funciones solemnes: Epis
introducido en el oficio divino una música profana, copus cum scholá. Ducange, en la palabra cantores.
los autores eclesiásticos se han quejado amargamen Esto es lo que ha dado importancia á la dignidad de
le; y muchos concilios prohibieron terminantemente chantre en las iglesias catedrales; porque su funcion
este abuso, como el concilio in Trullo, el año 692, el es la de vigilar la conducta de los cantores y la decen
de Cloves non, en 77, el de Bourges, en 158%, etc. cia del culto divino.
Es muy triste que este desorden sea mas comum en Binghan, Origen ecles., l. 3, c. 7, dice que no hu
el dia que nunca lo fue: todas las personas verdadera bo chantres en la Iglesia antes del siglo IV; pero con
mente piadosasdesean su reforma. fiesa que se hace mencion de ellos en la liturgia de
Algunos misioneros, para amansar á los salvajes San Marcos: nosotros probaremos en su lugar que es
americanos, y atraerlos á sus instrucciones, no encon ta liturgia es anterior al siglo IV. Dice que el estado
traron mejor medio que divertirlos con los sonidos de de los chantres era un Orden eclesiástico como el de
la flauta, realizando así lo que la fábula refiere de Or lectores, y que recibian una especie de ordenacion;
feo. Este artificio inocente y laudable prueba el poder nosotros creemos que si hubiera sido una Orden, hu—
de la música sobre los hombres mas groseros, y en biera continuado siéndolo. Quiere, que en su origen,
general cuán fácil es corromperlos con sonidos afemi la funcion de cantar fuese comun á todos los fieles.
y lascivos. Bingham, Orig. ecles., l. 1, c. 1, Convenimosen esto, pero al menos era preciso que al
- 1 o y Sig. gunos cantores instruidos diesen el tono para evitar
Brucker, con un aire de desenfado tan comun á los la cacofonia; tambien el año 36 ó 370, el concilio de
protestantes, pretende que S. Gregorio el Grande, Laodicea mandó que solo los cantores inscritos en el
con el cuidado que tomó de establecer en Roma escue catálogo de la lia pudieran subir á la tribuna y
las de canto eclesiástico y formar cantores, contribu - cantar en el libro. Más los protestantes, infatuados
yó mucho á aumentar la ignorancia y barbarie del con su práctica no hallan cosa mas hermosa que el
siglo VIII., Júzguese, dice, del progreso que podian estilo gótico de los salmos de Marot, y, el canto lúgu
hacer las letras y la filosofia, cuando eran nece— bre que han adoptado; quisiéramos saber por qué no
sarios diez años para aprenderá cantar el oficio di cantan los cánticos del antiguo y nuevo Testamento;
vino. Hist. philos., t. 3, p. 572: t. 6, p. 561. Esta son menos respetables que los salmos?
acusacion nos parece absurda. 1.° S. Gregorio no fue
el que condujo á los bárbaros, y el que les aconse Cantor (Machicot) de la iglesia de Nuestra Se
jó ¿ asolaran la Europa y destruyeran todos los ñora en Paris, que es menos que los beneficiados y
medios de aprender las letras y las ciencias; es preci mas que los cantores asalariados; lleva capa en las
so no atribuirle la falta é imperfeccion de los méto— fiestas semi-dobles y rige el coro. De la palabra ma
dos que se seguian entonces para aprender una cien chicot, cuyo origen no es muy conocido, se ha forma
cia ó un arte cualquiera que fuese; no estaba obliga do en francés el verbo machicoter, que quiere decir
do á crear otros nuevos. Antes de enseñar á los adornar el canto, hacerle mas ligero , y compuesto
¿ las ciencias y la filosofia, es preciso enseñar añadiéndole los notas del acorde para darle armonia
es á leer, escribir, contar, y las verdades de la reli Este canto, que es una especie de falso abordon, se
ion; en las escuelas de las aldeas aprenden tam llama tambien canto figurado ó de facistol.
ien á cantar en el facistol; en todos los paises del
mundo son estos los primeros estudios; presumimos Capa. Véase veSTIDURAS SAGRADAS ó sACERD0
TALESe
que sucedia lo mismo en las de Roma; y no es de ad
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Capellam, Capilla. Una capilla es un orato— hay reglamento alguno general, civil ni canónico,
rio ó lugar destinado á la oracion, en el cual hay por sobre esta materia; cada iglesia tiene sus costumbres
locomun un altar en que se dice misa; el capellan es particulares, á las cuales se debe atener. En algunas
el eclesiástico encargado de servirla. Se llama tam llevan muceta como los canónigos; en otras se ven
bien capilla el oficio pontifical celebrado por el Papa: privados de esta decoracion. Por lo general están su
se dice que tiene capilla cuando oficia solemnemente. jetos á la jurisdicion del cabildo; no forman un cuer—
En Versalles se llaman dias de gran capilla las fies p0 separado, ni pueden ausentarse sin permiso suyo;
las solemnes en que oficia un obispo en la capilla tienen que hacer en el coro las funciones que les man
del rey. dan; si tienen bienes en comun no pueden aceptar
Es muy creible que las capillas se hayan llamado fundaciones, ni hacer arriendos enfitéuticos sin el
asi porque se conservaban en ellas las capasó mantos consentimiento del cabildo, que es el que tiene la fa—
de los santos. Sabido es que nuestros reyes hacian lle cultad por derecho de cuidar de la rendicion de las
var á la cabeza de sus ejércitos la capa de S. Martin, cuentas. En algunas iglesias los capellanes son amo
despues la encerraban en su santa capilla. Ducange, vibles, en otras no lo son. Son considerados como
en la palabra capilla. amovibles cuando están á sueldo de los canónigos; pe
Algunos sabios críticos han observado que las an ro con todo, no los pueden despedir sin causa, y la
tiguas iglesias ó catedrales no tenian capillas colate vejez ó las enfermedades no se consideran como tales.
rales. Las primeras se construyeron por la parte de Dejan de ser amovibles, cuando sus destinos están
afuera, unidas al muro, para colocar en ellas los se erigidos en títulos de beneficios, y entonces pueden
ulcros de los santos: despues se horadaron los muros resignarlos, pero deben generalmente tomar el con
ormando de esta suerte una parte de la iglesia. Senlimiento del cabildo.
XX Capellan. (Derecho eclesiástico). Esta pala DE LOS CAPELLANES DEL PAPA. Estos tienen
bra que trae su etimología de capilla, es de una sig— un origen diferente de los demas que hemos dicho. Se
nificacion muy estensa. Se aplica á los eclesiásticos llamaban asi porque asistian al papa en las audiencias
que sirven en varias iglesias catedrales y colegiatas; que daba en su capilla, y en las consultas que le
á los que hacen el servicio en las capillas del rey, de hacian de todas partes. Eran como unos verdaderos
la reina y de los príncipes; á los que bajo el título de asesores que el papa escogia entre los legistas mas
limosneros se emplean en decir misa en las capillas sabios. Sisto IV, los redujo al número de doce, y las
particulares, y á los que tienen capilla ó capellania decretales están llenas de los decretos que daban an
erigida en título de beneficio. Como los capellanes del tiguamente. Además de estos capellanes el papa tie
rey son lo mismo que los limosneros, hablaremos de ne tambien otros, asi como los príncipes, cuyas fun
ellos en el artículo respectivo. Solo observaremos que ciones son las de asistir al oficio divino ó decir la mi
algunos autores han dicho que los primeros capela sa delante de él; y para este fin tiene el Santo Padre
nes de nuestros reyes habian sido instituidos para cuatro capellanes secretos y ocho capellanes ordina
guardar la capa y otras reliquias de S. Martin, que rios. Son unos destinos vitalicios que se solicitan con
se conservan en palacio, las cuales acostumbraban ansia.
llevar consigo al ejército; pero esto es muy dudoso, y La Orden de Malta tiene tambien sus capellanes;
solo hablaremos de ello para no dejar nada por decir pero son diferentes de los que llamamos asi comun
acerca de nuestros antiguos usos. Tampoco tenemos mente. Los capellanes de Malta son los eclesiásticos
nada que añadir acerca de los capellanes empleados admitidos en esta Orden, y estos son de dos especies:
en celebrar la misa en las capillas particulares, por— los unos son in sacris, y los otros no, por lo que se lla
que se les da tambien en Francia el nombre de limos man capellanes-diáconos, y no entran en el consejo de
neros, pero el de capellan está mas en uso en otros es la Orden como no sean obispos ó priores de la iglesia
tados católicos, bien sea que residan en la corte ó si— condecorado5 con la gran cruz. Generalmente los ca
gan á los ejércitos. Trataremos de los capellanes con pellanes van despues de los caballeros simplemente
siderados como titulares de los beneficios ó capillas legos, y tienen encomiendas que les están designadas
en los artículos cAPILLA ó CAPELLANA, por lo que nos á cada uno en su lengua. -

limitaremos á tratar de los capellanes adictos al ser El rey de Inglaterra tiene cuarenta y ocho capella
vicio de los cabildos. Los capellanes de las catedrales nes; cuatro de ellos predican cada mes en la capilla
y colegiatas deben honrar y respelar á los canóni haciendo el servicio de la casa real, y al rey en su
gos; por lo comun no tienen entrada ni voto en el ca oratorio privado; publican tambien las gracias en au
bildo, y aun menos los honores y prerogativas que per sencia del procurador del gabinete. Cuando están de
tenecen á los canónigos. La distincion que hay entre servicio tienen una lista, pero sin distribuciones. (Es
ellos depende de los usos de cada iglesia, como asi racto del Diccionario de jurisprudencia).
t
mismo lasdistribuciones de que deben participar. De
ben por lo mismo los canónigos tratarlos con dulzura, Capilla y Capellania. (Derecho canónico).
como que les sirven de ayuda para el servicio divi Segun los etimologistas esta palabra viene de aquella
no, y no considerarlos como unos criados; mirarlos especie de cofre ó caja en que estaban depositados los
como unos coadjutores que ellos mismos se han bus huesos de los mártires, que llamaban capsa, y de este
cado para que los alivien en el canto del coro y en el vocablo se formó el de capella, capilla, para designar
servicio de la lglesia. En donde hay título de funda el sitio en que estaba deposilada una urna. Las capi
cion de las capellanias debe servir de ley para ellos llas eran antiguamente un paraje donde se reunian
y los canónigos; pero si no la hay, deben conformar— los fieles para orar y celebrar la memoria de los san
se con las costumbres y la posesion en que esten. No los mártires en presencia de sus reliquias; y en su
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acepcion propia una capilla es un sitio de devocion dera como tal siempre que el obispo la haya conferi
particular bajo la advocacion de la Santísima Virgen, do en título tres veces. Ferreiro con Gui-Papa presu—
de otro santo ó santa, ó un lugar destinado á honrar men que una sola colacion basta ; lo cual parece que
particularmente algunos misterios de la religion; pero se adoptó en una decision del parlamento de Metz de
aun tieneotras diversas significaciones en materia ecle de marzo de 169, que Augeral refiere en el tomo
siástica. Efectivamente, capilla se denomina algunas 1.", cap. 33. Cuando las capellanias son de título
veces una iglesia particular que no es catedral, ni co perpetuo, son propiamente beneficios; y aunque los
legiata, ni parroquia, ni abadía, ni priorato; esta es— capellanes regulares sean amovibles á voluntad de
pecie de capilla es la que los canonistas llaman subdio; sus superiores, sin embargo, si estas fuesen servidas
es decir, que está separada de cualquiera otra igle r eclesiásticos seculares, aunque esten fundadas en
sia. También se llama capilla una parte de una igle— as iglesias de los regulares, los capellanes que sean
sia mayor, sea catedral ó colegiata, ó cualquiera otra rovistos una vez en ellas serán inámovibles. Tam
en la que hay un altar y se dice misa. Los canonistas ien pueden obtenerse despachos en la corte de Roma
llaman á estas capillac sub-tecto, que es decir, que es para las capellanias; pero estas provisiones son contra
tán contenidas bajo el techo de otra iglesia mas gran la fundacion de ellas, y por lo mismo nulas por todo
de. Algunos canonistas franceses las llaman capella derecho, sin que ie sirva al poseedor de regla de paci
nías para distinguirlas de las capillas propiamente ta ficis possesoribus. Observa Febret que seria un abuso
les, que constituyen por sí solas una iglesia particular. el que pretendiese despachos de la corte de Roma de
Hay tambien capillas domésticas en lo interior de los las que están fundadas en oratorios particulares, por—
monasterios, hospitales, comunidades, en los palacios que no tienen título de beneficio, y puede servirlas
de los príncipes, casas de campo y en otras de los par cualquiera á voluntad del fundador.
ticulares; pero estas no son propiamente mas que unos Las capellanias están comprendidas bajo el nombre
oratorios privados, aunque se les haya concedido li de beneficios simples, y sujetas al patronato real. Para
cencia á los dueños para mandar decir misa en ellas. poseer una capilla ó capellania con título de benefi
El canon 21 del concilio Agatense, celebrado en 506, cio segun el derecho comun, basta tener siete años y
da permiso á los particulares para tener capillas en haber recibido la prima tonsura, á no ser que por la
sus casas, pero con prohibicion á los clérigos de ce misma fundacion sea sacerdotal; es decir, que el título
lebrar en ellas sin permiso del obispo. exija indispensablemente en el titular el réquisito de
Finalmente, la voz capilla se toma tambien por el presbítero, en cuyo caso no bastaria que un eclesiás-.
beneficio fundado ó anejo á ella, aunque tambien le tico se sujetase á ordenarse de sacerdote dentro del año
dan el nombre de capellanía. De esto se infiere que la de haber tomado posesion; pero debemos observar
voz capellanía es casi un sinónimo de la de capilla, y que la obligacion de celebrar algunas misas no cons—
que los canonistas la usan igualmente para significar tituye á una capellania como sacerdotal, porque el ca
unas veces la capilla, y otras el título del benefi. pellan puede encargar su cumplimiento á otro. Cuan—
cio; sin embargo, algunos presumen que hay una di do se trata del servicio y cargas de una capellania, es
ferencia entre las dos palabras, y que capellanta es preciso atenerse al título de la fundacion, porque unas
propiamente el título del beneficio, y capilla el altar exigen residencia contínua, y otras le dejan al pro
en que está fundada. En el sentido mas comun el tér visto en plena libertad. Aunque el título de funda—
mino de capellania se usa para esplicar el título de un cion no hable de la residencia, se entiende que la re
heneficio fundado en el altar de una capilla sub-tecto.
quiere la naturaleza misma de la fundacion cuando,
Era bastante frecuente en lo antiguo la fundacion de por ejemplo, se dice en ella que se nombre un sacer.
las capillas ó capellanias, porque la voluntad de un dote para decir misa todos los dias en la capilla desig.
particular en el artículo de la muerte bastaba para nada, es evidente que entonces la capellania exige
esto, pues su testamento era equivalente á un título una residencia; pero no seria lo mismo, segun hemos
de fundacion; pero en los tiempos posteriores, y espe observado, si en vez de nombrar un sacerdole se di
cialmente en el dia despues del edicto de 179, que jera que se nombre un capellan, porque pudiendo ha
llaman el edicto de las manos muertas, deben con— cer éste el servicio por medio de otra persona no es
currir la autoridad eclesiástica y la secular á la fun tará obligado á la residencia; sobre lo cual observa
dacion. Las capellanias de fundacion anterior, en las remos que las capellanias con residencia son incom
¿ no tuvo parte la autoridad eclesiástica ; no pue patibles con cualquiera otro beneficio que la exija
en considerarse como beneficios, aun cuando tengan igualmente, aunque sea en la misma iglesia y en el
cargas de misas y otros servicios, porque no son mas mismo recinto. El sacerdote que está encargado de
que fundaciones al cargo de aquellos que representan decir las misas por sí mismo no puede encargarlas á
á los fundadores; mas cuando son autorizadas por el otro sino cuando está enfermo; pero los canonistas no
obispo, son verdaderos beneficios. De estas últimas están acordes acerca de la duracion de la enfermedad;
hay unas cuyo título es perpetuo, y en otras revoca— unos conceden al enfermo dos meses, y otros de ocho
ble. Segun Barbosa, el titular de una capellania de es— á diez dias. Con respecto á la aplicacion de la misa;
ta última clase no puede ser removido ¿ ella sin jus no puede seguir otra intencion que la del fundador,
to motivo; pero cuando no cumple con las cargas, ni puede percibir honorario si no se lo permite el tí
uede el patrono revocarle, porque no se miran como tulo de fundacion: observaremos que el título de fun
¿ propiamente tales. Una capellania no se re dacion es imprescriptible, bien sea con referencia á la
puta por beneficio si el título de su ereccion no está maturaleza del beneficio mismo, ó á las cargas y cir
autorizado por el obispo; pero si el título se ha perdido, cunstancias de las personas que deben cumplirlas.
6 se duda que haya sido espiritualizado, se la consi Brillon nos dice que en la iglesia de Champigny, en
TOMO I, 7
 CAP 326 CAP
Brie, habia sido adjudicada en devolucion por senten mo. Si se hubiese creido, como los ¿, que
cia del parlamento de Paris de 15 de mayo de 1691 este sacramento no tiene mas Virtu º escitar la fé,
una capellania sacerdotal que tenia residencia obliga no se le habria añadido un símbolo de la pureza del
toria por la fundacion, aunque habia estado poseida alma que recibe el bautizado.
por mas de siglo y medio sin haber hecho caso de la
residencia. Capiscol. Dignidad de muchos cabildos ó igle
Las capellanias están sujetas á las visitas de los sias, tanto catedrales como colegiatas, en Provenza .
obispos y superiores que pueden imponerlas la déci y en el Langüedoc. Parece que viene á ser la misma
ma como á los demas beneficios. Las que están en las dignidad que la de Chantre, que preside el coro. Ca—
iglesias y han sido construidas y dotadas por los par iscol se dice por caput scholae, gefe de los cantores.
ticulares no están á disposicion de los mayordomos de ¿ el pontifical romano los eclesiásticos que acom
fábrica, porque asi se decidió con motivo de una cape pañan al obispo en las ceremonias se denominan
llania de S. German el Auxerres en 18 de marzo de schola.
1602 en favor del señor de Lembille contra el señor
Diron, teniente civil en el Chatelet, (un tribunal de 33 Capiscol. (Derecho eclesiástico). Es una dig
Paris). La fundacion se puede probar por el título y nidad que hay en algunos cabildos de colegiatas. Los
tambien por estar en posesion pública de usar de aque canonistas no convienen acerca de su origen. Unos la
lla capilla, con esclusion de otras personas, especial confunden con la de primiciero, y otros presumen que
mente si la posesion, como dice Loiseau, ha sido con el capiscol era antiguamente un individuo del cabildo
signos visibles de la fundacion; por ejemplo, los es que cuidaba de los ornamentos y vestidos sacerdota
cudos de armas en las bóvedas, en la portada , en el les, y de los ministros del altar, segun la opinion de
altar ó en otros parages de la capilla. Si estuviese la los benedictinos. En el dia es la primera dignidad en
capilla bajo la boveda principal de la iglesia sin ha algunas colegiatas. S. Gregorio el Grande la atribuye
berla cerrado nunca, ó hiciese mucho tiempo que el una especie de jurisdicion en el coro á fin de velar
público estaba en posesion de usar de aquel sitio, en para que se guarde la mayor decencia en el servicio
ionces no seria tan peculiar al fundador que pudiese divino. Tambien parece que tenia derecho de impo
impedir á los feligreses de la parroquia el uso de ella: ner penas á los clérigos que cometian alguna falta, y
tendria sí un sitio preferente para él y su familia por denunciarlos al obispo si no mudaban de conducta.
que asi lo declaran las memorias del clero, pero si la Como el derecho que tienen las dignidades se arregla
capilla estuviese en una de las naves de la Iglesia con por la costumbre particular de los cabildos, no se
su bóveda particular, el fundador puede tenerla cer pueden determinar esactamente los diversos privile
rada. Ya hemos dicho al principio de este artículo que ios que gozan los capiscoles en las iglesias donde los
los canonistas las dividen en dos clases: en ¿ ay. Varios canonistas afirman que sus funciones eran
sub-dio, es decir, que forman una iglesia distinta y en lo antiguo las de colectar los impuestos personales,
separada de otra; y en capillas sub-tecto, que consti pero en el dia ya no existen semejantes atribuciones
¿ una parte de la catedral ó colegiata. Notaremos en ellos. (Estracto del Diccionario de Jurisprudencia).
sobre este punto que dos capillas ó capellanias sub-eo
dem tecto no las puede obtener y servir una misma Capital. Se llaman pecados capitales los vicios
persona, aunque sean de corta renta. Demaisons cita habituales ó las pasiones desarregladas que son en
un decreto de 3 de agosto de 1658. nosotros el origen comun de nuestros pecados. Tales
Se llaman santas capillas unas iglesias distinguidas son la soberbia, la avaricia, la envidia, la gula, la
de las que nuestros reyes son los fundadores y patro lujuria, la ira y la pereza. Véanse estos diferentes
nos, y las tienen dentro de sus palacios; como por artículos, Creen algunos intérpretes que Jesucristo
ejemplo, las santas capillas de Paris, de Vincennes, quiso designarlos, cuando habló de los siete demonios
e Dijon, de Bourbon, etc., y antiguamente la de que se apoderan del hombre. Matth. c. 12, y.5;
Bourges. Los tesoreros, canónigos, chantres y depen Luc. c. 8, y. 2.
dientes de la santa capilla de Paris gozan de los mis
mos privilegios concedidos á los capellanes de la ca Capítula, Capítulo corto. Son algunos versícu —
pilla real. los sacados de la Sagrada Escritura, y relativos al ofi
Tambien se da este nombre á los ornamentos par— cio del dia, que se recitan despues de los salmos y
ticulares de un obispo, en los cuales se comprenden antes del himno. La capítula de completas se dice
el báculo, la mitra, el pectoral, etc.; y hay algunas despues del himno, y es seguida de un responsorio
iglesias catedrales que gozan del privilegio de exi como en las horas menores.
gir á un obispo dichos ornamentos cuando toma po
sesion de su prelacía, y otras lo tienen para heredar Capítulo de un libro. Sobre la division de los
los despues de la muerte. (Estracto del Diccionario de libros santos en capítulos y versículos véase coNcoR
Jurisprudencia.) DANClA.

CAPITULO. Reunion de canónigos ó religiosos.

Capillo. Gorro ó capuz de tela blanca que se
pone á los niños en la cabeza despues de baulizarlos,
en lugar del vestido blanco, símbolo de la inocencia,
con que se revestian en otro tiempo los catecúmenos
despues de bautizados. Este vestido blanco era un
testimonio de los efectos que se atribuian al bautis
CAPITULOS (tres). Son tres escritos condenados en
el V concilio general celebrado en Constantinopla.
Véase coNSTANTINoPLA.
XX Capítulo ó cabildo. (Derecho canónico).
Esta voz en asuntos eclesiásticos tiene tres significa—
 CAP 327) CAP
ciones diferentes. En su mayor latitud se toma por una sis. No necesitan contar con el consentimiento del ca
comunidad de eclesiásticos que sirven en una iglesia bildo sino en lo concerniente al interés comun ó par—
catedral ó colegiata, ó por una comunidad de religio ticular del mismo; por ejemplo, cuando se trata de
sos individuos de una abadia, priorato ó casa conven enagenar los bienes temporales, reunir ó suprimir
tual. Tambien llaman capítulo ô cabildoálas juntas que alguna dignidad ó beneficio en la catedral, establecer
celebran los eclesiásticos ó religiosos para deliberar el orden del oficio divino, reformar el breviario, ins—
y resolver los negocios en comunidad. Los caballeros tituir ó suprimir las fiestas y otras cosas semejantes
de las Ordenes regulares, hospitalarias y militares ce que interesan particularmente al cabildo en cuerpo,
lebran tambien capítulo, como son los de Malta, los óá cada individuo de él. En estos casos se acostum—
de S. Lázaro, los de Sancti Spiritus; y finalmente, se bra que el obispo comunique sus órdenes juntamente
llama capítulo ó cabildo en las iglesias catedrales ó con el cabildo, haciendo espresa mencion en ellas de
colegiatas en los monasterios aquel parage donde que son dadas despues de haber conferenciado, ó de
se reune el clero ó la comunidad. Dividiremos este comun acuerdo con sus venerables hermanos el dean
artículo en dos partes; en la primera trataremos de y canónigos. Interin el obispo ecsisla en sus diócesis,
los cabildos de las iglesias catedrales y colegiatas con no puede el cabildo mezclarse en el gobierno de ella;
siderados como un cuerpo y como juntas, y en la se pero si el obispo se imposibilita por demencia ú otra
gunda de los capítulos de las Ordenes religiosas. causa semejante, suplen su falta los vicarios generales
Primera. . Cabildos considerados como cuerpo. La ue nombrán los canónigos. En Francia, por espacio
palabra cabildo en la acepcion de ser un cuerpo ecle— ¿ algunos siglos, cuando vacaba la silla episcopal, el
siástico empezó á estar en uso en tiempo de Carlo— metropolitano encargaba el cuidado de ella al obispo
Magno; así lo prueba Marcelo de Ancira en el trata— mas inmediato ó la gobernaba por sí mismo: desde
do que hizo sobre la decretal de Honorio III, super el siglo XII los cabildos de las catedrales estan en po
specula de magistris, y ya lo hemos dicho en el artí— sesion de gobernar las diócesis en la vacante: Glosa
culo CANóxigo. Un cabildo de canónigos regularmen ad cap. de confesione; Clementin de rerum permuta
te se compone de varias dignidades, como son las de tione. La jurisdicion del cabildo sede vacante es la
dean o pavorde, del chantre, del arcediano y de un misma del obispo, pero no puede ejercerla en cuerpo;
cierto número de canónigos. En algunas iglesias el debe nombrar unos vicarios generales y un provisor
chantre es la primera dignidad del cabildo: eso con— para ejarcer la jurisdicion voluntaria y, contenciosa.
siste en los lítulos y en la posesion en que estan. El Si hubiese provisores y vicarios generales nombrados
principal objeto de la institucion de los cabildos, y el por el obispo difunto, puede continuarlos el cabildo
único que en la actualidad desempeñan, es la cele— dándoles nuevos despachos, y tambien puede desti
bracion pública, perpétua y solemne de los oficios di tuirlos y nombrar otros. Los vicarios generales y pro
vinos y servicio de la iglesia, á la que no pueden de— visores nombrados por los cabildos sede vacante tienen
dicarse enteramente los demas ministros de ella por las mismas facultades que el obispo; por consiguiente
estar mas ocupados en la instruccion y direccion de no pueden ejercer su jurisdicion sobre los que están
los pueblos; así que su primer deber es no perdonar esentos de la del obispo, pero en lo demás hacen lo
medio alguno para que se haga el culto esterno con mismo que harian aquellos, menos las innovaciones
la decencia y magestad que le compete. Se cree ge considerables en la disciplina de la diócesis, pues no
neralmente que tres facium capitulum, pero no se son mas que unos administradores interinos. Espira
sabe que haya cabildo alguno de solo tres canónigos; do un año de vacante, conceden dimisorias para re
sin duda se querrá decir con esto que tres canónigos cibir las órdenes mayores, y tambien para la tonsura
son suficientes para reunirse en cabildo. En las igle— y las cuatro menores; y éstas son válidas si no las
sias catedrales goza el cabildo de algunos derechos, revoca el nuevo obispo antes de que hayan hecho
privilegios y esenciones estando la silla episcopal va uso de ellas. El cabildo puede representar al obispo
cante y aun tambien sede plena. El primero de los difunto solo en los asuntos pertenecientes á la jurisdic
privilegios goza sede plena es de que se le consi cion, y no en cuanto al órden; así es que ni él, ni sus
dera como el consejo del obispo. En la primitiva igle vicarios generales pueden ejercer funcion alguna del
sia los obispos nada hacian sin consullarlo con su cle carácter episcopal, como por ejemplo, la confirma
ro, al cual llamaban presbiterium. El concilio IV de cion, las órdenes, conceder indulgencias, etc. Toma
Cartago les mandó que lo hiciesen así, so pena de nu sino Discip. Ecca., part. 1.", ib. 3 º cap. 10 y
lidad. Despues que se separó la mesa del obispo de la núm. 10.
del clero, éste tomó el título de cabildo, y los intere— La colacion de los beneficios que vacan en aquel
ses fueron diversos. No obstante, el clero del obispo tiempo no pertenece al cabildo, porque está reserva
participaba del gobierno de la diócesis, como que for da al obispo sucesor. Si el obispo tuviese el derecho
maba un mismo cuerpo con el obispo, Los diputados de nombrar para los beneficios juntamente con el ca
de los cabildos de las iglesias catedrales continuaron bildo, nombra el rey un comisario que represente al
asistiendo siempre á los concilios provinciales y los obispo en las juntas capitulares: Edicto de enero de
suscribian. Actualmente los cabildos de las catedra ¿ en cuanto al patronato real. Si el nombramien
les ya no tienen parte en el gobierno de la diócesis; to pertenece al obispo solo, el beneficio vacante recae
los obispos estan en posesion de ejercer por sí, sin in en el mismo patronato. Edicto del mes de febrero de
tervencion del cabildo, la mayor parte de las funcio 1673, otro de enero de 1682, declaracion de 17 de
nes que se llaman ordinis, y las que son de la juris agosto de 1735. En cuanto á los curatos que son de
dicion voluntaria d contenciosa: haciendo estatutos colacion del obispo y vacan sede cacante, el cabildo
sinodales para la disciplina de sus respectivas dióce dispone de ellos, sin perjuicio del derecho de los gra
 CAP 328) CAR
duados que pueden suplicar en justicia. Decreto del cientes á ella; aprobar confesores para que adminis
ö de setiembre de 162 en el diario de las Audien— tren el sacramento de la penitencia á los individuos de
cias. Tambien en el tiempo de la vacante de la silla los cabildos, pues deben elegirlos enlre los sacerdotes
episcopal puede nombrar el cabildo para los benefi aprobados por el obispo, ó sujetar á su aprobacion
cios pertenecientes á una prebenda que está en litigio. aquellas personas de las cuales se quieran valer.
Diario de las Audiencias, decreto del 8 de agosto Está reservado solamente á los obispos el ad
de 1687. mitir las reliquias de los santos, el permitir su
El derecho canónico concede al cabildo en sede va esposicion al público y su traslacion, aun en las igle
canto la administracion de lo temporal; pero entre sias de los esentos, y lo mismo sucede con las imá
nosotros el rey hace administrar lo temporal por unos genes, que deben ser reconocidas y aprobadas por
ecónomos en virtud del derecho de regalia. Han que ellos. Tanto los cánones de los concilios como la juris
rido algunos cabildos sustraerse de la jurisdicion del prudencia civil estan acordes en conservar estas pre
obispo; pero la jurisprudencia mas moderna declaró rogativas á los obispos. Los canónigos esentos que
como un abuso la mayor parte de las esenciones, aceptan algun destino del obispo, como el de vicario
confirmando solo las que estaban fundadas en razo general, provisor, promotor, etc. quedan sujetos por
nes legítimas y autorizadas por el consentimiento del este hecho á su jurisdicion.
obispo y del soberano. No es suficiente en esta mate— Algunos cabildos de catedrales ó colegialas tienen
ria la posesion inmemorial para que sirva de título, sus eslatutos particulares que sirven de ley para ellos
pero puede corroborar el titulo si es legítimo. Los de cuando estan autorizados por los superiores eclesiás
crelos han mantenido á los cabildos, que estaban fun ticos y el parlamento. Por lo regular tienen por obje
dados en título, en la jurisdicion correccional sobre to el asignar algunas prebendas á determinadas per
las dignidades, canónigos y dependientes de su igle sonas, la asistencia á los oficios, la residencia y dis
sia, pero con la condicion de apelar al provisor del tribuciones manuales, el rango y asiento en el coro,
obispo, el cual tiene derecho de prevencion , si el la opcion á las prebendas y casas canonicales, y otras
del cabildo no ha informado en el término de tres cosas semejantes, Los derechos particulares que go—
dias: decretos de 2 de setiembre de 1670, y de se zan algunos cabildos como el de anata, depósito, etc.
tiembre de 168%. Si el cabildo tiene solo el derecho constan de los títulos y posesion en que estan.
de correccion, y no la jurisdicion contenciosa, no Los cabildos de regulares no se pueden secularizar
puede escomulgar, poner en la cárcel á sus benefi sino con , bulas acompañadas de los despachos reales
ciados, ni privarles de sus beneficios, porque esto está registrados en debida forma, debiéndose observar las
reservado al obispo. Es necesario observar que en el condiciones referidas en ellas. No nos detendremos
caso de haber cometido los dependiente faltas graves mas en hablar sobre lo concerniente á los cabildos de
las catedrales y colegiatas, porque no es posible dar
ó algun delito, no pueden los cabildos ejercer su ju—
risdicion en cuerpo, sino por medio de un provisoruna idea esacta de los derechos y esenciones de cada
ó promotor que deben nombrar, y el provisor del uno en particular, pues que varían al infinito, y son
obispo puede interponer apelacion á mínima de las mas eslensos ó limitados, segun el grado de favor
Senlencias ¿ por el provisor del cabildo. crédito que gozaba el cabildo que las solicitó y las ob—
Algunos cabildos presumieron tener facultades de dar tuvo. Estas han ocasionado muchas contestaciones en
dimisorias á los clérigos de su corporacion, segun los tre los obispos y los cabildos, y las decisiones son va—
títulos que tienen para ello y la posesion en que estan. rias segun ¿ títulos y la posesion. En esta materia
Sin embargo, deben estar estos redactados y consen puede aplicarse el proverbio comun en las audien
tidos por los obispos, porque la potestad de conceder cias de que las decisiones son dadas para aquellos que
dimisorias está reservada á los obispos por una disci las obtienen, y que es preciso pronunciarlas, no por
plina cuyo origen no se puede asegurar, pero que ha los ejemplares que haya, sino conformándose con la
sido conservada en la Iglesia por los cánones de todos razon, con la ley y la equidad. Dos razones se pue
los concilios, desde el de Nicea hasta el concilio de den oponer á las pretensiones que pueda tener un ca
Trento, y esta disciplina ha sido siempre protegida bildo con otro; la primera, que las esenciones casi
por la jurisprudencia, como lo prueba la sentencia siempre estan concebidas en los mismos términos, y
pronunciada en 15 de febrero, de 166 en favor del sin embargo no se ponen en ejecucion en la misma
obispo de Chalons-sur-Marne. forma; la segunda, que los privilegios, siendo odio
Los cabildos esentos estan bajo la jurisdicion de sos por sí mismos, lejos de ser susceptibles de esten
los obispos en lodo lo que es concerniente á la fé y á sion, se deben restringir, en cuanto sea posible. Aña
la doctrina de la Iglesia, y en lo que pertenece á la diremos tambien algo acerca del derecho que presu
ejecucion de los edictos que contienen censuras y men tener algunos cabildos, con perjuicio de los curas
condenacion de errores. Tampoco pueden los cabil párrocos, de administrar los sacramentos á los canó
dos esentos dar orden alguna para que haya procesio nigos y beueficiados enfermos, de hacerles el entier
nes generales, rogativas públicas, Te deum y otras ro despues de su fallecimiento, llevándolos á su igle
ceremonias de las que se hacen por órden superior. sia, aunque esten domiciliados en las parroquias de
Les está prohibido igualmente publicar y conceder in la ciudad. La jurisprudencia civil varía mucho en es
dulgencias y jubileos ni autorizar y reconocer los mi— te punto, porque en unos casos es favorable á los ca
lagros; introducir novedades en el oficio divino y cor. bildos, y en otros á los párrocos. Los parlamentos de
regir los antiguos breviarios; reducir las fundada Tolosa y de la Bretaña parece que miran este dere
ciones de sus iglesias, arreglar lo concerniente á las chocomo perteneciente esclusivamente álos párrocos
fábricas, sea la de su iglesia ó de las que son pertene sin admitir ninguna prescripcion. Nuestra opinion so
 CAP 329) CAP

bre este asunto es, que hay una distincion entre las Segunda. Capitulos de las Ordenes religiosas. Los
iglesias catedrales y las colegiatas. Se puede sin in religiosos, á imitacion de los canónigos, tienen sus
conveniente conservar la pretension de las catedrales, reuniones para deliberar y resolver los negocios tem
porque es muy natural que habiendo sido las prime porales y espirituales de una casa ó de toda la Orden.
ras parroquias de las ciudades episcopales, pudiesen A esta clase de reuniones se le llama capitulo. Los
conservar sobre sus individuos un derecho que tenian hay de tres especies: los capitulos particulares de ca
¿ por la posesion; pero respecto á las colegiatas, da casa ó monasterio; los capitulos provinciales en
ien se les podria conceder este mismo derecho á las las Ordenes que estan divididas en provincias, como
probasen que su institucion habia precedido á la los mendicantes; y los capitulos generales, que se
e las porroquias que fueron posteriores. En lo demas componen de los diputados de toda las casas de la
seria muy útil y ventajoso que hubiese una ley gene Orden.
ral en términos precisos y claros, la cual fijase irre De los capitulos particulares. Los capitulos particu
vocablemente la jurisprudencia en este punto, evitan lares de cada casa ó monasterio son la reunion los re
do las contestaciones entrelos ministros del altar. Con ligiosos capitulantes de aquellos monasterios ó casas
cluiremos observando que los cabildos no tienen fa celebrada en forma ordinária y segun lo establecido
cultad de hacer reglamentos concernientes á la policia or las constituciones, ya sean las generales de toda
esterior de su corporacion. Aunque sea muy lauda— a Orden, ya sean las particulares de las casas pro
ble el motivo de una leyó reglamento nuevo, no pue— pias, si las tuviesen, en los que se trata de sus nego
de obligará los individuos sin ser autorizado por las cios espirituales y temporales. De sus constituciones
audiencias soberanas. constan las facultades de estos cabildos; pero segun la
De los cabildos considerados como juntas. Se titulan regla de S. Benito los capítulos de los monaste
cabildos las juntas que tienen los canónigos para de— rios que se gobiernan por un abad, son el conse
liberar sobre los negocios comunes á ellos. Estas tie jo de este y tienen con él mancomunadamente la
nen dos objetos ¿ ; la conservacion ó resta autoridad del gobierno. Debe, pues, el abad, segun
blecimiento de la disciplina, y la administracion de la regla, consultar al capitulo; pero no se le obliga á
los bienes temporales; y se deben celebrar en el sitio tomarle parecer y seguir su consejo mas que en los
ordinario y destinado para el efecto, de modo que si casos espresos en la misma regla. Segun el abad Tri
hubiese algun impedimento legítimo que obligue á temio, son los siguientes: primero, cuando se trata
celebrarlas en otra parte, se debe hacer espresa men de enagenar bienes y fondos del monasterio; segundo,
cion en el acta. Los cabildos bajo este punto de vista, para admitir alguno á la profesion; tercero, para afec
son ordinariosó estraordinarios: los primeros se cele tar ó hipotecar bienes al pago de alguna renta ó cen
bran en los dias señalados, y á la hora determinada; so; cuarto, si quiere el superior enviar alguno de sus
y los otros segun que lo exijan las ocasiones y las religiosos á otro monasterio; quinto, si le quisiese
circunslancias; pero unos y otros deben ser convoca obligar á lo que no estuviese prescrito en la regla;
dos en la forma acostumbrada, y con los requisitos sesto, si trata de concederá alguno la asociacion ó li
necesarios. El concilio de Basiléa y la pragmática san— liacion en sus monasterios; sétimo, si quiere dar un
cion prohibieron celebrarlos en las horas destinadas destino monacal perpétuo, y aunque este mismo abad
al oficio divino. La convocacionse hace en nombre del añade ser conducente que el superior no haga nada
dean ó de la primera dignidad, y cuado no, la hace sin consultar al capítulo, Van—Espen observa que la
el canónigo más antiguo. Segun el concilio III de Le regla de S. Benito limita poco la autoridad de los aba
tran, celebrado en tiempo de Alejandro III, las de— des y que no puede obligárseles mas que á la obser
liberaciones se deben resolver á pluralidad de votos. vancia de dicha regla. Esto mismo debe entenderse
Esta costumbre ha prevalecido casi en todas partes. de las abadesas, priores y prioras perpétuas y con
Cuando estan divididos los pareceres, tiene el voto título en los monasterios en que no hay abades.
preponderante ó decisivo en algunos cabildos el dean En las demas Ordenes religiosas y casas de S. Benito,
ó presidente , y la deliberacion se resuelve segun la cuyos títulos son por encomienda ó que han abrazado
opinion que él sigue. Hay sin embargo algunos casos en la nueva reforma, el capitulo del monasterio no so
que un solo canónigo puede oponerse legalmente á las lo es el consejo del abad ó superior, sino que reside
deliberaciones capitulares, interponiendo la apela en él, propiamente hablando, la administracion y
cion quejándose de abuso. Los cabildantes no pueden autoridad verdadera. El superior solo cuida de la
opinar en negocios concernientes al interés de su fa conservacion del orden y observancia de la dis -
milia; y en los cabildos en quehay dos canónigos pa ciplina.
rientes en , los grados prescritos por el reglamento, De los capítulos provinciales. Son aquellos que se
si opinan de la misma manera, sus votos no valen forman de los diputados de cada uno de los monaste
mas que por uno, cuando se trata de corregir esce rios que componen una provincia.
sos; pero conserva cada uno el suyo en lo que hace En ellos se arreglan los negocios de toda la provin
á nombramientos ó presentaciones de beneficios y cia y se nombran los superiores cuando las prelacias
otras cosas semejantes. Las deliberaciones y actas son electivas y temporales; pero si son perpétuas so
capitulares se deben redactar por escrito en un libro— lo se nombran visitadores. Tienen además facultad de
registro destinado para ello, y deben sucribirlas los hacer reglamentos ó estatutos para la provincia, aun
canónigos que han asistido al cabildo y autorizarlas el que no tienen fuerza de ley hasta que reciben la supe
secretario, el cual debe hacer espresa mencion de rior aprobacion.
que se han observado todas las formalidades de cos Capítulos generales. Se componen de los diputados
lumbre. de todas ó casi todas las casas de una Orden religiosa:
 CAP 330) CAP
forman los estados, el concilio ó el primer tribunal Capuelati, encapuchados. Se llamaron así áfi
de la Orden donde se discuten y resuelven los asuntos nes del siglo XII ciertos fanáticos que establecieron
de mayor importancia. Eran desconocidos en un prin una especie de cisma civil y religioso con los demas
cipio, porque las casas no formaban entre sí lo que hombres y tomaron como signo de su asociacion par
hoy se llama Orden ó congregacion. Cada monasterio ticular un capuchon blanco, del ¿ colgaba una es
tenia un superior y se gobernaban los unos indepen pecie de plancha de plomo: su designio, segun de
dientes de los otros. Pero despues, á consecuencía de cian ellos, era el de obligar á los que hacian la guer
las grandes reformas verificadas en los monasterios ra á vivir en paz.
de la regla de S. Benito, se crearon las Ordenes y las Esta idea fue parto de la cabeza de un carnicero,
congregaciones y los abades de los monasterios para hácia el año 1186. Decia que se le habia aparecido la
sostener la union que querian reinase en lo sucesivo Virgen Santísima, y que le habia dado su imagen y
entre sus casas, así como para conservar la discipli la de su Hijo con esta incripcion: Cordero de Dios
ma, resolvieron reunirse de tiempo en tiempo en capí que quitas los pecados del mundo, dadnos paz: que le
tulos generales. Las demas congregaciones y Ordenes mandó formar una asociacion, cuyos miembros lleva—
religiosasimitaron bien pronto esta costumbre. El con rian esta imagen con un capuchon blanco, símbolo
cilio IV de Letran, celebrado en tiempo de Inocen de paz y de inocencia, y se habian de obligar bajo
cion III, reconoció las ventajas que de ella resulta— juramento á conservar la paz entre sí, y á hacerla
ban, é hizo una regla para todas las Ordenes religio observar á los demas.
sas, prescribiéndoles la celebracion de los capítulos El cansancio y descontento que produjeron en to—
generales á lo menos cada tres años. dos los ánimos las divisiones, las guerras intestinas y
En ellos se deciden los negocios generales de la Or la anarquia de aquel siglo desgraciado, dió consisten
den, se eligen los generales y primeros destinos de cia al capricho raro de los encapuchados ; hallaron
ella: en ellos reside tambien la facultad concedida á aprobadores, é hicieron prosélitos en todos los Esta
algunas Ordenes por las bulas de aprobacion ó con— dos, principalmente en Borgoña y en Berri. Des
firmacion que han obtenido, de hacer las alteracio para establecer la paz empezaban por
nes que juzgue convenientes en sus constituciones y es nacer la guerra, y vivian á espensas de los que no
tatutos; pero estas alteraciones y nuevos estatutos no querian unirse á ellos. Los señores y los obispos le
tienen fuerza de ley en Francia si no estan autoriza vantaron tropas , disiparon á estos fanáticos, é hi
dos por un despacho real registrado en debida forma. cieron cesar su pillage.
Disposicion sábiamente tomada para conservar las re Mas bien pronto se presentaron otros tales, como
galias y evitar que se introdujesen en ellas cosas con los stadings, los circunceliones, los albigenses, los
trarias á las libertades de la Iglesia galicana ó á las valdenses, etc., animados del mismo espíritu, y co
máximas del reino. metieron los mismos desórdenes.
Los capítulos, asi generales conmo provinciales, se En el siglo siguiente, el año 1387, hubo en Ingla—
deben convocar y reunir segun las formas prescritas, terra encapuchados de otra especie: eran hereges
pues de otro modo serian nulos: ejercen en primer sectarios de Wiclef, que no querian descubrirse, y
grado de jurisdicion sobre los religiosos de su respec conservaban su capuchon delante del Santísimo Sa
tiva Orden, y sus sentencias se reputan de primera cramento: tomaron la defensa de un tal Pedro Par
instancia. cshul, religioso agustino que dejó el hábito , y para
Personas que tienen voto deliberativo en los capítu justificar su apostasia, acusaba á su Orden de muchos
los. En el tiempo que las Ordenes religiosas se reunie— crímenes. Labbe, Nueva Bibl. t. 1, p. 77, D“Ar
ron en congregaciones, casi todos sus individuos gentré, Collee. Judic., t. 1, p. 123; Sponde, ad
¿?lº.
perpetuamente en el estado de legos, so—
otro religioso ascendian al sacerdo
o el ahad
an. 1377.

cio para el servicio y utilidad de sus monasterios. SX& Capuchisaas. (Derecho eclesiástico). Se lla
De aqui el que se convocasen á los capítulos todos los man asi las religiosas de Santa Clara por razon de su
individuos de la comunidad sin distincion de sacer— hábito semejante al de los capuchinos. Las llaman
dotes ni legos; pero cuando en el siglo XIV se multi tambien hijas dela pasion por la gran austeridad que
plicó entre los monges el número de los clérigos adop ractican. La primera fundacion de las capuchinas
taron el reglamento del concilio celebrado en Viena ue en Nápoles en 1538, por la madre Maria Lorenza
en tiempo de Clemente VI, el cual prohibia, que se Longa. Habiendo Luisa de Lorena, viuda de Enri
admitiesen en las juntas particulares de las iglesias que III, oido hablar de las capuchinas que habia en
catedrales, y colegiatas á los canónigos que no estu— Italia, quiso fundar en Francia un monasterio de esta
viesen ordenados in sacris. Por consiguiente, á los religion, con cuyo motivo escribió al papa Clemen
hermanos legos ó conversos se les separó poco á poco te VII solicitando concediese la dirección espiritual
de los capítulos; y esto que en un principio fue solo de las religiosas á los capuchinos. Cuando esperaba
costumbre, adquirió despues fuerza de ley. Esta me— de un momento á otro ver cumplidos sus deseos, fue
dida fue toleralable en los monasterios porque la dig atacada por una grave enfermedad, de la cual falle
nidad del sacerdocio daba motivo para ¿ Ulla ció; mas á fin de que se llevasen á efecto sus piado
diferencia entre los sacerdotes y los legos (1). sas intenciones, dejó en el testamento un legado de
veinte mil escudos con el objeto de fundar un monas
1 llemos suprimido algunos párrafos del original francés, por terio de esta religion, eligiéndolo para que la enter
que tratando de costumbres y decretos de la nacion vecina , sin
uerza de ley entre nosotros, creemos que interesan solo á los rasen en él. Encargado e duque de Mercoeur de la
tribunales y canonistas de aquel pais. (N. de la R.)
ejecucion de la última voluntad de su hermana la
 CAP 331) CAR
princesa, murió tambien sin poder darla cumplimien religiosos hacen voto de pobreza, segun el cual no
io; pero la duquesa de Mercoeur se apresuró á eje ¿ poseer ningunos bíenes, aunque sea en cuerpo
comunidad.
cutarlo, pidiendo al efecto su beneplácito al rey En
rique IV, quien se lo concedió por reales despachos Por esta razon están esentos de todo impuesto sino
registrados en el parlamento en 1602. Inmediatamen abusan de sus privilegios contra los derechos reales.
te compró el palacio de Retz, llamado casa del Peron, Les está permitido bacer la demanda en las ciudades
silo en la calle de S. Honorato, frente á los capuchi y aldeas; pero no recibir á título de limosna mas que
nos, poniéndose los cimientos al monasterio en el año algun pequeño legado en dinero y por una sola vez.
166. La duquesa, en virtud de un breve del papa Régimen de los capuchinos segun sus constituciones.
que la permitia dar el hábito de novicias á las jóvenes En el capítulo se hace la eleccion de los ministros pro
que quisieran abrazar la reforma que iba á estable vinciales y custodios. Cada comunidad puede enviar
cerse, eligió, de comun acuerdo con los capuchinos, al capítulo un discreto que tiene voto con el guardian.
doce jóvenes, y las puso en una casa que tenia en la Este último es discreto nato por su destino. En la elec
Raqueta, arrabal de S. Antonio, donde permanecie cion de los discretos tienen tambien voto los herma—
ron dos años, practicando la regla, en que debian nos conversos ó legos. El provincial tiene cuatro de
profesar. Cuando el monasterio estuvo en disposicion finidores que forman su consejo y deben ser elegidos
de habitarse, se trasladaron á él con la mayor solem del cuerpo del capítulo; pero el provincial no puede
nidad, y un año despues profesaron todas en 21 de ser elegido aunque sea de los ausentes. Los custodios
junio de 1607. que elige el capítulo general pueden asistirá él, á no
En 1625 se fundó otro convento de capuchinas en ser que razones muy justas aconsejen lo contrario.
Marsella á espensas de Maria de la Oracion, baro Las facultades del P. General son aprobar á los reli—
nesa de Alemania, la cual hizo venir tres capuchinas giosos para el ministerio de la predicacion, si estos
de París para gobernar, esta nueva comunidad. La presentan un certificado de los definidores y lectores
observancia de las capuchinas es la misma que las de en teología de haber estudiado dos años de filosofía
las religiosas de Santa Clara, teniendo ademas algu y cuatro de teología. Los examinadores pueden dar
nos estatutos particulares que las han dado los capu su voto ó negarlo por la via del escrutinio. Ademas,
chinos. (Estracto del Diccionario de Jurisprudencia). el religioso aprobado debe sujetarse á lo que el obis
po diocesano quiera exigir de él antes de egercer su
Capuchino. (Derecho eclesiástico). Es un reli ministerio.
gioso de la mas estrecha observancia de la Orden de El provincial es el primer superior de la provincia,
S. Francisco. Reciben este nombre por la forma de la á él se dirigen todos los asuntos contenciosos, que
capilla ó capucha punteaguda que cubre sus cabezas. juzga de acuerdo con sus definidores. Cuando hace la
Su hábito es de un paño burdo que consta de un man visita no hay mas autoridad que la suya en el con
to y capucha de color pardo; se dejan crecer la barba vento donde se halla. En estas visitas oye las que
llevan sandalias y cerquillo. Esta reforma de los jas de los inferioros contra sus superiores, reprende
ermanos menores ó franciscanos tuvo por autor al ¿ abusos si los hay, y examina las cuentas: conclui
rincipio del siglo XVI á Mateo de Baschi o Bassi, do este acto de jurisdicion el guardian entra en el
¿ menor observante del ducado de Spoleto, lleno de sus derechos. Cada convento es gobernado
religioso del convento de Monte-Fiascone, el cual en or un guardian que es elegido por el provincial y
1525 afirmaba que Dios le habia revelado milagrosa os definidores en escrutinio secreto. Dura solo tres
mente muchas veces que debia practicar al pie de la años, si no es reelegido, ¿ para deponerlo se necesita
letra la regla de S. Francisco. Se retiró con permiso una sentencia segun las formas jurídicas de la Orden.
del papa Clemente VIII y el consentimiento de su pro Tambien tienen un vicario elegido por los superiores,
¿? un desierto, acompañándole doce personas, y que destituyen á su voluntad. Algunos religiosos
y estableció en él su reforma, que se estendió despues ultramontanos adoptaron la máxima de reconocer por
asombrosamente. jueces propios á los magistrados de los tribunales
El mismo pontífice aprobó esta congregacion en su seculares; pero por un mandato de la audiencia se
bula del año 1529, confirmándola su sucesor Paulo ll previno todo lo contrario, y desde entonces no han
en 1535, y dándoles un vicario general con los demas intentado mas desconocer la jurisdicion civil.
superiores competentes; mas no se les concedió esta
blecerse fuera de Italia, donde estaba concentrada su Carácter. Este término significa en teología un
reforma, hasta el pontificado de Gregorio XIII. En el signo espiritnal é indeleble que Dios imprime en el
reinado de Carlos IX un religioso franciscano, natural alma de un cristiano por medio de algunos sacra
de Amiens, llamado Pedro Deschamps, empezó á es mentos. Solo tres obran este efecto; el bautismo, la
tablecer esta reforma eu en el convento de Picpus, confirmacion y el orden; asi que no se les reitera,
segun los despachos reales dados en Blois en el año de aun á los hereges, con tal que al administrarlos no
1572. El P. Pacífico, italiano, se reunióá Deschamps, haya faltado nada de esencial, tanto en la materia co
y Enrique IV, y su madre, Catalina de Médicis, les mo en la forma.
concedieron permiso para fundar otro convento en La realidad de este carácter se prueba por algunos
París cerca de las Tullerías. Protegidos por los reyes pasages de S. Pablo, cuyo sentido es por cierto dis
de Francia, sucesores de Enrique IV, se multiplicaron putado por los hereges y aun por algunos teólogos
estraordinariamente los capuchinos, llegando á tener católicos; pero tanto en esta cuestion como en cual
diez provincias de su Orden, entre ellas la Lorena, y uiera otra, su tradicion debe servirnos de guia.
COIn ¿ en todas mas de cuatrocientas casas. Estos . Agustin, al escribir contra los donalistas que rei
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teraban el bautismo y la ordenacion, supone y sos Inocencio III; pero S. Agustin vivió cerca de ocho
tiene que estos sacramentos imprimen un carácter cientos años antes que este papa. Sin embargo, creen
indeleble. L. contra Epist. Parmen, n. 28. Toda la los protestantes que no se debe reiterar el bautismo;
Iglesia del Africa confirmó esta verdad por su asen se habian de encontrar muy embarazados si trataran
timiento, y tal es el sentir de la Iglesia católica. de dar otra razon que la práctica de la Iglesia. Si fue—
Un sabio anglicano, que lo combate con todas sus ra cierto, como dicen, que los sacramentos no hacen
fuerzas, dice que jamás se trató de esto en ninguno mas efecto que escitar la fé, qué importaría reiterar
de los antiguos concilios. No obstante, confiesa que el bautismo tantas veces cuantas se creyera oportuno?
muchos Padres de la Iglesia llamaron al bautismo CARACTERES HEBRA COS. V. HEBREo.
el sello, el signo, la señal, el carácter de Jesucristo; CARACTERES MAGICOS. V. Magia.
pero jamás dedujeron de aqui sino que no se debe
reiterar este sacramento. Tampoco se deduce, dice, Caraitas. Secta de judíos opuesta á la de los ra
que un cristiano apóstata, infiel ó escomulgado, con binistas. Su nombre parece que se deriva del caldeo
serve todavia algun derecho ó privilegio en virtud Hara, escribir ó escritura, porque tomaban como re—
de su bautismo. Bingham orig; eccles.t. 11 , p. 256. gla de su creencia solo el testo de la Escritura; hacen
Nosotros convenimos en que el único derecho que le poco caso de las tradiciones de los rabinos y de su
resta es el de no ¿? ser bautizado, en el ca pretendida ley oral contenida en el Talmud.
so de que haya penitencia, y entre de nuevo en el No nos detendremos en hablar de lo que los he
seno de la Iglesia. braizantes, judios ú otros han escrito con motivo de
Tambien, dice este crítico, cuando los antiguos los caraitas, porque no están de acuerdo, y sus con
concilios escomulgaban ó degradaban un sacerdote, jeturas no se fundán en ninguna prueba,
decian: «Le hemos privado del sacerdocio y de todo Lo mas probable es que la secta de los caraitas tu—
poder sacerdotal; declaramos que ya no es sacerdote, vo origen en el siglo VI de nuestra era, poco tiempo
y le privamos hasta de la comunion seglar, etc.» despues de la compilacion del Talmud. Los judíos mas
¿Qué le queda, pues, á este sacerdote degradado en sensatos, despreciando las visiones, puerilidades y
virtud de su ordenacion Respondemos que errores amononados en esa enorme coleccion, toma
le queda el poder radical de la orden, y no el de ron el partido de atenerse al testo de los libros santos
egercer sus funciones. Esto es tan cierto, que si este y rechazar todas esas tradiciones rabínicas. Por lo
sacerdote llega á ser absuelto y reintegrado, no se menos los mas moderados consintieron en mirarlos
le ordena de nuevo; volverá á egercer válida y lí solo como un ausilio que p0dia servir hasta cierto
citamente las funciones del sacerdocio. No está en el punto para esplicar la Sagrada Escritura y los dife
interés de un anglicano el sostener lo contrario, pues rentes usos de la ley de Moisés; pero sin mas autori
de aqui se seguiria que los obispos y sacerdotes de dad que la que los autores de este comentario habian
Inglaterra, escomulgados como hereges por la Iglesia tenido á bien asignarle.
romana, perdieron desde aquel momento su carácter Por esto los rabinistas ó rabanistas, partidarios ce
y todas sus facullades, y por consiguiente no pudie— losos del Talmud, y que le atribuyen tanta autoridad
ron ordenar válidamente; que el clero de la Iglesia como al testo mismo de la Sagrada Escritura, tienen
anglicana no se compone sino de puros seglares, co— á los caraitas como cismáticos y hereges, les atribu
m0 nOSOtrOS CreemOS. yen gratuitamente una infinidad de errores y los de
En cuanto á la naturaleza del carácter de que ha testan acaso tanto como los antiguos judíos aborrecian
blamos, los teólogos no están acordes en su esplica á los samaritanos. Se cree que fue un judio babilonio,
cion. Como la palabra carácter significa literalmente llamado Anan, el que por el año 750 se declaró abier
un grabado, no puede aplicarse á nuestra alma sino tamente contra las tradiciones del Talmud, y con
por metáfora. sumó el cisma que hasta entonces no se habia mani
Durando, in quartum dist. , q. 1, dice, que el festado.
carácter no es una cualidad absoluta distinta del Los rabinos que dieron á los caraitas el nombre de
alma, sino una simple denominacion esterior, por cu saduceos, son evidentemente injustos; porque los ca—
y0 medio el hombre bautizado, confirmado ú ordena raitas admitian los dogmas que negaban los saduceos,
do, está dispuesto por solo la voluntad de Dios y hecho la ecsistencia de los espíritus, la inmortalidad del al
apto para egercer, ya pasiva ya activamente algunas ma, las penas y recompensas de la vida futura, pro
funciones. Si alguno es capaz de entender esta pala bándolo con el testo de los libros santos, Leen la Es
breria, le felicitaremos por ello. critura y su liturgia en público, y en particular en la
Otros, sostienen que el carácter es una cualidad lengua del pais en que habitan, en Constantinopla en
real y absolula, una facultad de egercer ó recibir co— griego, en Caffa en turco, en Persia en persa, y
sas santas, que reside en el entendimiento como en su en árabe en todos los parages en que esta lengua es
sugeto inmediato. Tournely, de Sacram., ingen., vulgar.
quest: , art. 2. Aun cuando nosotros supiéramos Dicen que ecsisten caraitas en Polonia, Rusia, en
cuál de estas dos opiniones es la mas cierta, no sa— la Crimea, en el Cairo, en Damasco, en Persia y en
briamos mas por eso. Es preciso limitarse á creer lo Constantinopla; pero en corto número, pues que ape
que la Iglesia enseña, renunciar á la ambicion de nas asciende su número de cuatro á cinco mil; tam
comprender lo que es incomprensible, y esplicar lo bien añaden que son los judios mas honrados. Se co
que es inesplicable. nocen poco sus libros en Europa; sin embargo, me
Los prolestantes niegan la existencia del carácter recian ser leidos mejor que losde los rabinos. Se veria
sacramental, y dicen que fue inventado por el papa que en la esplicacion de una infinidad de pasages de
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la ley y de los profetas, se aproximan mucho al sen ban sirviendo en una iglesia ó capilla; esta es la an:
tido que los dan los cristianos. tigua y verdadera interpretacion de esta palabra.
Pero, si nos es permitido sospechar alguna cosa, Leon IV los llama en el concilio de Roma celebrado
observaremos que los caraitas no nos son conocidos en el año 833, presbiteros sui cardinis y á sus igle
sino por los escritores protestantes: es peligroso que sias parrochias cardinales. Asi permanecieron hasta
la conformidad que estos últimos han encontrado en el siglo XI; pero habiéndose aumentado la grandeza
tre sus principios y los de los caraitas, no les haya del Papa, pensó en formar un consejo de cardenales
prevenido á favor de esta secta judia; es necesario que fuésen de mayor dignidad que los antiguos pres—
juzgar de esto por los libros de sus doctores. Véase bíteros. Es cierto que el nombre ha quedado, pero ya
Prideaux, Hist. de los judios, l. 13, núm. 3, t. 2, no existe lo que significaba. Antes que tuviesen la
en ...", p. 162; Brucker, Hist. crít. filosófica, t. 2, preferencia sobre los obispos, y se constituyesen due
página 730 y siguientes. ños de la eleccion del Papa, se pasó algun tiempo;
ero luego que estuvieron en posesion de estos privi—
Carboraismo. V. “SocieDADEs secRETAs. egios, empezaron á usar del capelo encarnado y de
la púrpura, de suerte que, fomentándose cada dia su
»X& Cardenal. (Derecho eclesiástico). Esta voz poder, se han hecho superiores á los obispos aunque
tiene muchas acºpiones en francés. En su sentido no tengan mas que la dignidad de cardenales. Du
propio y natural viene á ser la relacion y cualidad cange observa que en el principio habia tres especies
de primero, principal ó el mas considerado. Por es de iglesias: las verdaderas iglesias se llamaban pro
ta razon, los etimologistas dicen que trae su origen piamente parrochias, las segundas diaconías, por
de la palabra látina cardo, que significa quicio, por que estaban unidas á los hospitales en que servian los
que parece que todas las cosas por su naturaleza diáconos, las terceras eran unos simples oratorios,
giran y ruedan sobre los puntos ¿ por de en que se decia misa, servidos por unos capellanes
cirlo así, y llaman virtudes cardinales la prudencia, locales con residencia, y que para distinguir las igle
la justicia, la templanza y la fortaleza, porque se las sias principales ó parroquías de las capillas ú orata
mira como base y fundamento de todas las demas. En torios las dieron º nombre de cardinales.
el derecho canónico, la palabra cardenal demuestra el Por consiguiente, las iglesias parroquiales sirvie
título de cierta dignidad eclesiástica de que está re— ron de título á los cardenales presbíteros, y algunas
vestido un prelado eclesiástico que tiene voto activo y capillas se lo dieron á los cardenales diáconos. Otros
pasivo en el cónclave para la eleccion de los papas. notan que se llamaban cardenales no solamente los
Algunos autores dicen que la palabra cardenal en es presbíteros, sino tambien los diáconos titulares y
ta acepcion viene de la latína in-cardinatio, que adscritos á una cierta iglesia, para diferenciarlos de
significa la adopcion que hacia una iglesia de un pres los que servian en ellas como interinamente y por
bítero de otra estraña, separado de ella por alguna comision. Las iglesias titulares eran una especie de
desgracia; Empezó á usarse en Roma y Rávena, por parroquias, es decir, unas iglesias destinadas cada
que las iglesias de aquellas dos ciudades eran las mas una en particular á un presbítero cardenal, con un
ricas, y se retiraban á ellas ordinariamente los sa distrito fijo y determindo que les pertenecia, y con
cerdotes mas infelices. Los cardenales componen el sus pilas bautismales para administrar el , bautism6
consejo y senado del Papa. Habia en el Vaticano una en el caso que no pudiese administrarlo el obispo. Es
constitucion del Papa Juan que fijaba el derecho y tos cardenales estaban subordinados á los obispos, y
los títulos de los cardenales, diciendo, que asi como or esta razon suscribian en los concilios despues de
el Papa representa á Moisés, asi los cardenales re os obispos, como, por ejemplo, en el que se celebró
presentan los setenta ancianos que ¿? y resol en Roma en el año de 868. No solo eñ Roma habia
vian las cuestiones particulares con la autoridad pon— presbíteros cardenales, sino tambien en Francia; y
tifical. asi, el cura de la parroquia de San Juan de las
Origen del título de cardenal. Los cardenales en Viñas se llama cardenal de esta parroquia, en un
su primera institucion eran los presbíteros principa—. instrumento antiguo de Tibault , obispo de Soi
les ó los curas de las parroquias de Roma. En la pri sons, en el cual, confirmando la fundacion de la
mitiva Iglesia se llamaba presbiter-cardinalis el pres abadía de san Juan de las Viñas, hecha por Hugo,
bítero principal de una parroquia que seguia inme señor de Chateau-Tierri, ¿ que el presbítero
diatamente despues de su obispo. Se distinguian por cardenal de aquel parage, presbiter cardinalis illius
esta razon de los otros de menos dignidad que no te loci, dé cuenta del cumplimiento de su obligacion con
nian iglesia ni destino. Se empezó á usar en esta acep los feligreses al obispo de Soisons, ó á su arcediano,
cion hácia el año 150, aunque otros dicen que como lo hacia anteriormente: los mismos términos,
fue en tiempo del Papa Silvestré, el año 300: estos y el mismo sentido usa el privilegio del rey Felipe I,
¿ cardenales eran los únicos que podian dado en 1076, que confirma la fundacion de san
autizar y administrar los demas sacramentos. Cuan Juan de las Viñas. El compendio de la Iglesia de
do hacían obispos antiguamente á los presbíteros car— Paris y la descripcion de esta ciudad, por Piganiol
denales, quedaba vacante su cardenalato, porque de la Fuerza, nos dicen que el obispo de Paris, tenia
creian ascenderá otra mayor dignidad. S. Grego— en otro tiempo presbíteros cardenales que le debial
rio se sirve frecuentemente de esta palabra para de asistir cuando celebraba de pontifical, por Navi
signar una gran dignidad; y en tiempo del Papa dad, por Pascua y el dia de la Asuncion. Estos eran
Gregorio, los cardenales presbíteros y los cardena - los curas de san Pablo, de Santiago, de san Severino,
les diáconos eran los presbíteros ó diáconos que esta de san Benito, de san Lorenzo, de san Juan en Grºº
TOMO I. 8
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ve y de Charonne, asi como los priores de san Es gio al cardenal obispo mas antiguo cuando el deca
teban des—Grés, de san Julian el Pobre, de san Mer nato está vacante y en sus ausencias. Respecto á los
ry, y de Nuestra Señora de los Campos. Los curas cardenales presbíteros y cardenales diáconos, cada
párrocos de Sens, de Troyes y de Angers aun hoy uno tiene asignado su título en aquellas iglesias ó dia
se titulan curas cardenales. Tambien se les dió este conías, donde eran simples titulares antiguamente los
titulo á algunes obispos por su dignidad de obispos. cardenales presbíteros ó diáconos. El número de los
por ejemplo, á los de Maguncia y de Milan: y algu cardenales obispos es siempre fijo; pero el de los pres
nos documentos antiguos llaman cardenal al arzobispo bíteros y diáconos ha variado muchas veces. El con—
de Bourges, y lo mismo á su iglesia. El abad de cilio de Constanza fijó el número de cardenales en
Vendome se titula eardenal nato. veinte y cuatro; pero Sisto IV los aumentó á cincuen—
Los cardenales de la Iglesia romana se distribu la y tres, sin embargo de lo dispuesto por el concilio;
yeron en cinco iglesias patriarcales, á saber: la de y hace mucho tiempo que parece se ha fijado en se
san Juan de Letran, la de santa Maria la Mayor, la tenla.
de san Pedro del Vaticano, la de saa Pablo y la de El papa debe ser elegido solamente por los cardena
san Lorenzo. La iglesia de san Juan de Letran lenia les. Segun Onufrio, el primero que dispuso que el so—
siete cardenales-obispos, que se llamaban colatera berano Pontífice fuese elegido por el senado de car—
les ó hebdomadarios, porque asistian al Papa en los denales, en vez de serlo como antes de todo el clero
oficios divinos, y hacian cada uno su semana cuan de Roma, fue el Papa Pio IV en 1562; y otros asegu
do el Papa no celebraba, Estos siete obispos eran el ran que desde el tiempo de Alejandro, en 1160, es—
de Ostia, el de Porto, el de Silva-Cándida ó santa laban ya en posesion de elegir al Papa los cardena
Ruina, el de Albano, el de Sabina, el de Frascali, les, cón esclusion del clero, y aun presumen fuese
y el de Palestina. La iglesia de santa Maria la Ma de origen mas antiguo, asegurando que Nicolás II ba
yor tenia tambien siete cardenales presbíteros: el de bia sido electo en Sena en 1058 solamente por los
san Felipe y Santiago, el de san Ciriaco, el de san cardenales, y que este Papa dió el año siguiente dos
Eusebio, el de santa Pudenciana, el de san Vidal, el decrelos en un concilio compuesto de ciento trece
de san Pedro y san Marcelino, y el de san Clemente. obispos que se celebró en Roma. El primero dice en
La iglesia de San Pedro del Vaticano tenia los carde sustancia que cuando llegue á morir el Papa, los obis
nales presbíteros de santa Maria trans Tiberim, de pos, cardenales se rennirán primeramente para tratar
san Crisógono, de santa Cecilia; de santa Anastasia, de la eleccion, y que despues convocarán á los cléri
de san Lorenzo in Damaso, de san Marcos y san gos cardenales, y por último al clero y al pueblo pa
Martin, y de san Silvestre. La iglesia de san Pablo ra que presten su consentimiento. En virtud de este
tenia los cardenales de santa Sabina, de san la Prisca, decreto y algunos otros posteriores, en el dia los car—
de santa Balbina, de san Nereo y Aquileo, de san denales son los únicos que eligen al Papa. La consti
Sisto, de san Marcelo y de santa Susana. La iglesia tucion del cónclave para elegir los papas se hizo en
de san Lorenzo, estramuros, tenia los cardenales de el segundo concilio ¿ Leon en 127.
santa Praxedes, de san Pedro adeíncula, de san Lo Solo el Papa puede crear los cardenales. Del mismo
renzo in Lucina, de san Juan y san Pablo, de los modo que los cardenales eligen al Papa esclusivamen
cuatro santos coronados, de san Esteban en el monte le, asi tambien el Papa es el único que crea los car—
Celio y de san Quirico. Baronio en el año de 1057 denales; pero es eostumbre procederá esta creacion
cita un ritual ó ceremonial estraido de la biblioteca en varios consistorios con el consentimiento y bene
del Vaticano, que refiere esta asignacion de los car— plácito del sacro colegio. Los ceremoniales de la Igle
denales.
sia romana traen las fórmulas que han de guardarse
Estado de los actuales cardenales. Aumentado el po en este asunto. En ellos se ven las ceremonias de la
der del soberano Pontífice, los cardenales se constitu birreta y del capelo encarnado, las visitas que deben
yeron electores del Papa, trataron de distinguirse del hacerse, el beso de paz, el modo de cerrarles y abrir
resto del clero por la pompa esterior de sus vestidos, les la boca, la concesion del título y del anillo, y el
y se hicieron superiores á los obispos, arzobispos y modo de enviar la birrela á los ausentes. La birreta
primados, dándose la preferencia en todo únicamente es un bonete que les dá el Papa, ó se lo envia por uno
por este título. Urbano VIII les concedió el tratamien de sus camareros de honor despues de su nombramien
to de Eminencia el 10 de enero de 1630, porque has to. En Francia el rey mismo dá la birreta á los carde
ta entonces se les daba el de Ilustrísima, como á los nales que son de nombramiento suyo; pero tienen que
príncipes de Italia que no tienen tratamiento de Alte recibir el capelo de mano de Su Santidad. Inocen
za. Sacro Colegio son los cardenales divididos en tres cio IV fue el que dió á los cardenales el capelo encar—
órdenes ó clases; seis obispos, cincuenta presbíteros nado en el concilio de Leon, celebrado en el año de
y catorce diáconos, que componen el número de se 1265, como señal de la obligacion en que se constitu
ienta. Los cardenales-obispos, que son una especie yen de perder la vida, si fuese necesario, por el servi
de vicarios del Papa, tienen el título de sus obispados cio de Dios y de la Iglesia. El vestido de los cardenales
respectivos. Estos son el de Ostia, al que se reunió el se compone de una sotana, un roquete, un mantelete,
de santa Rustina, el de Porto, el de Sabina, el de una mucela; y en las funciones públicas y solemnes
Palestina, el de Frascali y el de Alva. Es costumbre usan de la capa pluvial sobre el roquete. Él color es
que los cardenales mas antiguos que hay en Roma diferente según el tiempo, unas veces encarnado, otras
tengan opcion á las iglesias de los obispos-cardenales
cuando vacan. La bula de Paulo IV concede faculta color de , rosa seca ó morado; y los cardenales que
des de hacer las funciones de decano del Sacro Cole son regulares no llevan otro color que el de su hábito
con el forro encarnado; pero el capelo y el bonete ó
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birreta encarnada son comunes á todos. Los cardena to provisto por el colador ordinario; y el cardenal de
les que envia el papa al lado de los príncipes sobera— Polignac, arzobispo de Auch, confirió el mismo be
nos estan condecorados con el título de lejados á la neficio el 21 de enero de 173% á un secular por de—
tere; pero si los envia á cualquier ciudad de sus estavolucion, atendiendo á la incapacidad del sugeto pro
dos, su gobierno se llama legacion, de las cuales hay visto por el colador ordinario. Habiéndose puesto la
cinco, que son la de Aviñon, la de Ferrara, la de demanda en el gran consejo entre las tres partes in
Bolonia, la de Perua, y la de Ravena. teresadas, el tribunal mantuvo en la posesion á An—
Derechos y prerogativas de los cardenales. Tienen tonio Carrero, que habia sido provisto en la corte
privilegio de altar portátil, en virtud del cual pueden de Roma, con la restitucion de frutos y las costas en
tener capillas domésticas. Barhosa nos dice que en la sentencia que se acaba de citar. Lacombe, que re
Roma se castiga como crímen de lesa Magestad el fiere este acuerdo en su coleccion de jurisprudencia
atentar á la persona de un cardenal. El mismo autor Canónica, espone los motivos y razones de que hi—
asegura que las casas de los cardenales dentro de cieron uso cada una de las partes para sostener su de
Roma eran en otro tiempo lugar de asilo é inmu— recho. Cuando los beneficios que son de colacion de
nidad; y aun tienen estos príncipes de la Iglesia el los cardenales se resignan, debe el resignante sobre
privilegio de librar del suplicio á los delincuentes, vivir veinte dias libres despues que ha sido admitida
encubriéndolos con su capa ó su capelo. El Concilio la resignacion, sin contar el dia de la admision y el
de Trento dispensa á los cardenales la residencia en de la defuncion ó fallecimiento, para que sea válida.
sus obispados. El Papa no puede usar del derecho Así lo dispuso el gran consejo en 1682 con motivo de
de prevencion en la colación de los beneficios que un canonicato de la iglesia de Narbona. Este privile
les vacan con tal que los contieran en el término de gio de los cardenales tambien se les ha concedido po
seis meses; es una de las prerogativas concedidas á el indulto llamado compacta. Tampoco están sujetos
los cardenales por un indulto de Paulo IV de 28 de á la reserva de los meses en la Bretaña ni en otros
mayo de 1555, que se llama comunmente compacta. paises que están bajo su obediencia, porque confie
Por este principio el parlamento de Paris resolvió en ren libremente los heneficios de su colacion en cual
15 de mayo de 1722, conforme al parecer de Du— quier tiempo del año que vacan. Antiguamente te
Inoulin, que la colacion de un beneficio hecha por nian los cardenales en Francia la preferencia sobre
un cardenal durante los seis meses de la vacante, co los príncipes de la sangre. Se vé que en los estados
mo ordinario, debia preferirse á la del Papa conce— reunidos en Tours, en tiempo de Luis XI, año 1470,
dida dentro del mismo término. La razon de esta de el cardenal de Santa Susana, obispo de Angers, es—
cision, referida por Lacombe, es que la colacion del taba á la derecha del rey, y el rey de Sicilia á la iz—
Papa dentro de los seis meses de los cardenales es quierda. En la consagracion de nuestros reyes y en
nula por falta de voluntad en el soberano Pontífice, y el parlamento, precedian regularmente los duques y
¿ falla de derecho: por falta de voluntad, porque pares eclesiásticos á los que eran legos, aunque fue
ay presuncion de que el Papa no bubiera conferido sen príncipes de la sangre, como los antiguos duques
el beneficio al que lo impetra, si hubiese manifestado de Borgoña; pero despues del edicto de 1576, dado
que el beneficio era de la colacion de un cardenal, por Enrique II, el rango de los príncipes de la casa
y que no se habian concluido los seis meses de tér real no dependia como antes de la dignidad de par,
mino que tiene para proveerlo: por falta de derecho, por lo que se les concedió la preferencia sobre los car
porque el Papa le ha renunciado por el indulto com denales. Cuando le daban á un cardenal una abadía
pacta, con respecto á los cardenales, dejando las co regular con título de encomienda, tenia jurisdicion
sas en el estado que tenian antes de que fuesen tole sobre los religiosos, y podia conocer en los asuntos
radas las prevenciones 1. de la disciplina interior del monasterio, y asi podia
La decision de que se trata fue con motivo del prio instituir y destituir al prior, admitir novicios y dar
rato de Voisnon perteneciente á la abadía de S. Be les la profesion, elc. Febret, en su tratado del abuso,
nigno de Dijon, que estaba en litigio entre dos que refiere una decision del gran consejo del año 1573, en
habían sido provistos en la corte de Roma. el uno la cual se confimó la destitucion del prior claustral
dentro de los seis meses concedidos al colador, que de la abadía de Baulieu, hecha por el cardenal de
tenia el indulto de los cardenales, y el otro despues Borbon, que era á la sazonabad comendatario de ellº,
de haber espirado este térmito sin que el colador hu desestimando la apelacion interpuesta por los religio
biese hecho uso de su derecho; pero en lo demas es sos contra el abuso que se suponia ; y por otra deci
te privilegio de los cardenales no tiene valor cuando sion del parlamento de París del 5 de febrero de 1558,
confieren los beneficios por derecho de devolucion. se declaró que se habia procedido mal y abusivamen
Asi se declaró en el gran consejo de 5 de marzo de te en la eleccion de prior claustral de la abadía de
1736 con motivo del deanato de la iglesia colegial S. Juan de las Viñas de Soissons, y en la confirma—
de S. Orens, Orden de Cluni, situado en la ciudad de cion que de ella habia hecho el obispo, ignorándolo
Auch. Habiendo vacado este beneficio en diciembre el cardenal de Gondi, abad comendatario de aquella
de 1733, el prior de San Orens, colador ordinario, abadía, y sin su consentimiento.
se lo confirió á un regular. Antonio Carrero, pres El fundamento de esta jurisprudencia, que se ob
bítero secular, logró ser provisto en él por la cor— serva todavia en Italia y en otras partes, es que los
le de Roma el 1 de enero de 173%, por haber va cardenales son asesores apostólicos; y cuando se les
cado por muerte, y resultar la incapacidad del suge confieren los beneficios regulares les conceden las fa
cultades mucho mas estensas que á los otros comen
1 Es un derecho pontificio en la provision de los beneficios. datarios; pero segun la disciplina de la iglesia de
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Francia, en el dia los cardenales que son abades co go de los diezmos. Los agentes generales del clero pl
mendatarios no pueden en cualidad de tales ejercer la dieron por su parte que S. M. se dignase desestimar
jurisdicion, ni corregir á los religiosos de sus aba la demanda de los cardenales, mandando que los con
dias. Asi se dispuso en la sentencia dió el gran tratos ejecutados entre el rey y el clero de Francia se
consejo en 30 de marzo de 169 en favor del prior verificasen segun su forma y tenor, con el bien enten—
claustral y los religiosos de la abadia de Auchin con dido de que la suma que se destinase por S. M
tra el cardenal de Estrees, abad comendatario de la para indemnizar á las ¿ y beneficios espolia
misma. Por esta razon, si un cardenal comendatario dos por la peste, se mandase retener en poder del re—
quiere ejercer su jurisdicion sobre los religiosos de cibidor general del clero del fondo de las treinta y
la abadia, es preciso que tenga bula del Papa, y esté seis mil libras, destinado particularmente á este ú
confirmada con los despachos reales, autorizados en otro semejante objeto, y con preferencia á las pensio
el parlamento del distrito á donde pertenece la aba nes de los cardenales; pero ¿ de Estado en 17
dia, y registrados en debida forma. No debemos re de abril de 1725 denegó esta peticion á los agentes
ferirnos sobre este punto á la doctrina opuesta que generales del clero.
se encuentra en la coleccion de Denisart. Cuando los De todo esto resulta que los cardenales no están
diezmos se pagaban en virtud de las bulas de los pa esentos de pagar los diezmos, como ha dicho Denisart
as, los cardenales estaban esentos de pagarlos. La mal informado, aunque cita las fuentes de donde sa
ula de Leon X de 16 de mayo de 1516 contiene en có la doctrina de que no del en pagarlos. Es cierto
cuanto á esto una disposicion terminante. En Francia que las seis mil libras que dañ todos los años á ca
gozaron de este privilegio hasta la época en que se da cardenal, casi equivale á una esencion; pero no se
empezaron á pagar los diezmos, por consecuencia de puede llamar tal. Cuando un obispo de Francia acepta
los contratos hechos entre el rey y el clero, en los cua la dignidad cardenalicia, tiene que acudir al patro—
les se les ha impuesto la obligacion de pagarlos como nato real, por razon de que siendo cardenal parece
á los demas eclesiásticos; pero el rey les concedió una mas particularmente afecto al Papa, el cual como
suma equivalente para indemnizarlos, la cual habia príncipe temporal es estrangero con respecto á Fran
de pagar el recibidor general. En el año de 1645 se cia; y no pueden percibir los frutos y rentas de su
fijó la suma en treinta y seis mil libras ó pesetas, y obispado sin que corrobore con un nuevo juramento
á cada cardenal le correspondian seis mil. El clero es de fidelidad el que ha hecho anteriormente al tiempo
cierto que reclamó muchas veces contra la distribu de aceptarla. Nuestros reyes dan á los cardenales el
cion, y la asamblea de 1655 consiguió del rey que las lítulo de primo, mas no por eso se crea que los car
treinta y seis mil libras que se daban á los cardena denales dejen de estar sujetos en Francia al derecho
les, se deslinasen en lo sucesivo en favor de las dió de indullo. Mr. D'Hericourt observa con fundamen
cesis y beneficios espoliados, sin que pudiesen con to que los cardenales están sujetos al indulto cuando
vertirse en otros usos; pero el cardenal Mazarino pu no se les ha concedido algun despacho real que los
do lograr otro despacho real en 1657 para que se les ecsima; y en efecto, asi resulta de la declaracion de
pagase otra vez esta suma á los cardenales; mas que Francisco del 18 de enero de 1581, registrada en el
dó sin ejecucion. La asamblea de 1670 concedió seis gran consejo el 31 del mismo mes. Es verdad que el
mil libras anuales al cardenal de Bouillon hasta la papa Clemente lX, que dió por supuesto que el papa
asamblea siguiente, en consideracion á su mérito per Paulo Ill habia ecsimido á los cardenales de la espec—
sonal, sin que ningun otro cardenal pudiese pre tativa de los indultarios, confirmó esta pretendida
tender lo mismo por su dignidad, añadiendo que es esencion con una bula; pero como observa el autor
ta gracia no se podria conceder en lo sucesivo. En de las leyes eclesiásticas, la confirmacion de un título
1671 el cardenal de Retz obtuvo un despacho real no pueden producir derecho alguno cuando el título no
que mandaba se le pagase una suma de seis mil li ecsiste. Y asi se ha creido siempre, aun despues de
bras, comenzando en 1.º de enero de aquel año, por la bula de Clemente lX, que los cardenales estaban
los diezmos que pagaban los beneficios que obtenia en sujetos al indulto si no habian logrado despachos rea
el reino. El clero de Francia, en la asamblea de 1680 les para ecsimirse. Aun eu este caso se les obliga, aña
y siguientes, dijo: que la suma anual de treinta y seis de el autor que acabamos de citar, á ocupar en sus
mil libras de que se trataba, se emplease en los bene— destinos á los indultarios nombrados por sus prede
ficios espoliados; y lo que no fuese necesario para es— cesores, si aun no estaban en la posesion de sus desti
te fin, se destinase al pago de los cardenales que te nos. Como en esta especie de despachos el rey no los
nian asignacion por algun despacho real. Como to— ecsime sino del indulto de los ministros del parlamen
dos los cardenales que tienen beneficios en el reino to, el gran consejo reputa están sujetos al indulta
obtienen iguales despachos, el clero les concede anual rio nombrado para llenar la especlativa del canciller.
mente á cada uno las seis mil libras que hemos dicho, La palabra cardenal se ha usado tambien por al
sobre el fondo de las treinta y seis mil que pretenden gunos escritores para significar un oficio secular. Los
estarles consignadas anteriormente. En 1725 los be primeros ministros de la corte de Teodosio se llama
neficiados de la Provenza pidieron al rey les perdonase ron cardenales. Casiodoro hace mencion del príncipe
los diezmos por causas del estrago que habia hecho la cardenal de la ciudad de Roma. Entre los oficiales ¿
pesle en aquel pais, y los cardenales presentaron unaduque de Bretaña se encuentra, en 147, un Raoul de
demanda pidiendo á S. M. que tuviese á bien el man Thorel, cardenal de Quillars, canciller y servidor del
dar no se tomase sobre las treinta y seis mil libras vizconde de Rohan, lo que da á entender que era un
consignadas á los cardenales ninguna cantidad para ministro subalterno. (Estracto del Diccionario de Ju
indemnizar á los beneficiados de la Provenza del pa risprudencia).
 -

CAR 337 CAR

Cardinales (virtudes). La prudencia, la tad de ser feliz, pues que por esta voluntad es por lo
justicia, la fortaleza y la templanza son llamadas por ue se desean todas las cosas. Luego el hombre ten
os teólogos virtudes cardinales ó principales; porque rá el mismo anhelo por la bienaventuranza sobrena
los filósofos moralistas han referido á estos cuatro pún tural que por la natural, en el momento en que le sea
tos principales todos los actos de virtud. Esta division conocida la primera.
no nos parece muy esacta. El nombre de virtud sig Efectivamente: ¿cómo desprenderse del único bien
nifica la fortaleza del alma; en este sentido todo acto que se desea necesariamente? El renunciar á él for
de virtud es una accion de fortaleza; no vemos por malmente es una cosa imposible. Aun haciendo abs
qué la religion no ha de ser uua virtud cardinal como traccion de él, el fin que se propone no es menos real.
la prudencia ó la justicia. Toda virtud puede ser prac El artista que trabaja no siempre tiene presente en
licada por un motivo de religion, y los actos de esta el ánimo el fin que se propone, aunque todo su traba
no tienen necesidad de otro motivo que el que le es jo se dirija á esto mismo. Por otra parte, el corazon
propio. - •º no hace esta ahstraccion: se trata aqui de un movi
miento del corazon, y no de una operacion del enten
Caridad. Virtud teologal, por la que amamos á dimiento.
Dios sobre todas las cosas y al prójimo como á nos— Santo Tomás que sobresalió por su gran juicio, de
otros mismos; así que la caridad tiene dos objetos, cia: aunque Dios no fuera todo el bien del hombre, no
Dios y el prójimo, le seria la única razon de amar. El amor presente y
Como se distinguen dos amores en Dios, uno per la felicidad futura van siempre unidos, segun el doc
fecto y otro imperfecto, los teólogos disputan para tor de la escuela.
saber en º se diferencian. Unos dicen que es solo Mas, acaso se dirá, aun cuando nosotros ignorára
en el grado de intension ó de fervor, y no por la di mos que Dios puede y quiere hacernos felices, ¿no
versidad de motivos; otros que el amor perfecto con podriamos elevarnos hasta su amor por sola la con
siste en amará Dios, solo por ser quien es, sin rela templacion de sus perfecciones infinitas? Bossuet
cion alguna con nosotros, al paso que el amor im responde, que es imposible amar á Dios sin conside
perfecto va acompañado de un motivo de interés ¿ como un sersoberanamente perfecto; ahora bien;
prop10. una parte de sus perfecciones es el ser bueno, libe
Mas la cuestion es el saber si la caridad perfecta ral, bienhechor y misericordioso para con sus criatu
escluye toda clase de miramientos respecto de nos— ras. Elijase si se quiere, como objeto de contempla
otros mismos. Cuando S. Pablo decia; Yo deseo mi cion entre las perfecciones divinas, las que no tienen
disolucion y estar con Jesucristo, Philipp. c. 1, y 23, ninguna relacion con nosotros; de la inmensidad de
el deseo de la bienaventuranza iba acompañado en él Dios, de su eternidad, de su presciencia y de su om
de la mas ardiente caridad. nipotencia, resultará la admiracion, el asombro, el
Hay que evitar, pues, dos escesos en esta materia. respeto, mas no el amor; el entendimiento se confun
Muchos aman á Dios pensando de tal modo en sí mis dirá, pero el corazon no será conmovido.
mºos, que Dios no ocupa mas que el segundo lugar en De iodo lo cual se deduce, que entre los atributos
su alecto. Este amor mercenario se parece al de los de Dios, los únicos que escitan entre nosotros senti
falsos amigos, que nos abandonan en el momento en mientos de amor son los que establecen cierta conec
que dejamos de serles útiles. Una alma que ama de sion entre Dios y nosotros; que estos sentimientos es
esla suerte, ella misma es su Dios en cierta manera; tan de tal suerte unidos á la idea de la felicidad, que
esle amor no es la caridad. no se los puede separar sino por medio de precisiones
0tros, amando á Dios, renuncian á todo motivo de quiméricas, falsas en la especulativa, y peligrosas
interés;
bien
su amor es tan puro que escluye todo otro en la práctica, Mas es preciso recordar que el senti
que no sea amar; no esperan ni desean otra cosa; miento de amor de Dios puede escitar en nosotros
eslan prontos á sacrificar la dulzura de este senti buenos deseos, inclinarnos á acciones escelentes, in
ºmiento si las pruebas que han de servir para purifi fluir en nuestra conducta, sin que nosotros tenga
carle ecsigen este sacrificio. Este amor nos parece una mos siempre de ello una percepcion distinta y pre
ilusion de algunos falsos especulativos. Colocando lo Senle.
sublime de la caridad en desprenderse de toda espe Como nos es imposible desenvolver perfectamente
ranza se hacen independientes. los motivos de nuestras acciones, conocer hasta qué
Un principio incontestable es que buscamos natu punto tal ó cual motivo contribuye á ellas, las dis
ralmente la felicidad; es, segun S. Agustin, la verdad putas sobre la esencia de la caridad serán siempre
mejor encendida y constante, es el grito de la huma interminables; los sistemas sobre este motivo estan
nidad; esta inclinacion no puede desagradar á Dios, tan mal fundados como los escrúpulos de las almas
pues es el que nos la ha dado. Segun la observaciontímidas y el entusiasmo de las imaginaciones vivas.
del sabio obispo de Meaux, S. Agustin, no habla de ¿De qué nos sirve saber si un acto de amor de Dios;
un instinto ciego; porque no se puede desear lo que puede ó no puede ser absolutamente desinteresado?
no se conoce, y no se puede ignorar lo que uno sabe Bástanos comprender que Dios se ha dignado intere
que quiere. El ilustre arzobispo de Cambray, escri sarnos en amarle y poner en él toda nuestra felici
biendo sobre este pasage de S. Agustin, creia que este dad. «Aquel, dice Jesucristo, que guarda mis man
Padre no hablaba más que de la beatitud natural. damientos es el que me ama; será amado de mi Padre;
Qué importa? le replica Bossuet; siempre queda de yo mismo le amaré y me daré á conocerá él». Joan.
mostrado que el hombre no puede ser desinteresa c. 14, y. 21. No tratemos de saber mas acerca de
do hasta el punto de perder en un solo acto la volun este punto. Veinte disertaciones sobre el amor de Dios
 CAR 338) CAR
no nos inclinarán á hacer un acto mas, y nos pon muy buena, cualquiera que sea el motivo que haya
dremos en peligro de no practicar esactamente el amor influido primero; mas la accion no es meritoria para
del prójimo. un cristiano sino en tanto que provenga de un mo
Lo mas malo que hay en esta cuestion, es que tivo sobrenatural inspirado por el movimiento de la
aquellos que sostienen con mas calor la necesidad gracia.
del amor de Dios son precisamente los que menos Un medio para dar á nuestras acciones todo el
motivos dan de él; afectan pintarle como á un señor mérito posible es perfeccionar, por actos de amor de
e el.
ribe,
que mas bien inspiran terror que amor Dios anticipados, nuestros pensamientos é intencio
nes subsiguientes; pedir á Dios con frecuencia que
Otra segunda cuestion es la de saber si toda accion supla lo que falta á nuestras acciones, cuando los
que no es motivada por el amor de Dios es un pecado, motivos naturales puedan prevenir los sobrenatura
como sostienen algunos teólogos que pretenden hallar les. El hábito de amar á Dios en el corazon de un
esta doctrina en S. Agustin. cristiano suple sincesar los actos del amor particular;
Se les responde que, segun el concilio de Trento, influye sobre sus acciones sin que lo perciba, de la
sess. 6, de Justific. c. 6, los sentimientos de fé, de misma suerte que el amor habitual que tenemos á
esperanza y de temor de Dios, no solo son laudables nuestros padres, amigos, patria, etc. Es pues pre
sino útiles, pues que nos disponen á la justificacion; ciso que tratemos de robustecer en nosotros la cari
luego las acciones hechas por estos motivos solos no dad habitual, la oracion, las buenas obras, la fre
son pecados, y con mas razon las que tienen por mo cuencia de los sacramentos, el recuerdo de los bene—
tivo el reconocimiento de los beneficios de Dios. ficios de Dios, etc. Pero no tendremos la felicidad de
S. Agustin ha llamado caridad al bien querer, la amar á Dios segun ioda la estension de nuestras fa
buena intencion aun en el pagano. Op. imperf. l. 3, cultades mas que en el cielo; en el seno de Dios se
n. 11 y 163. Es pues un error el pensar que este verificará la consumacion de la caridad del cristiano
santo doctor consideró como pecado toda accion que y de la felicidad del hombre. Aqui abajo tenemos dos
no fuese motivada por la caridad propiamente dicha. reglas: segun Jesucristo mismo, el que guarda los
De este pasage se deduce que las acciones, aunque mandamientos de Dios es el que le ama verdadera
no tengan por principio sinola virtud moral, tal co mente; y segun S. Juan, ninguno ama verdadera
II10 pudiera tenerla un pagano, son buenas y lauda mente á Dios, mas que el que ama á sus hermanos:
bles, aunque no meritorias para la salvacion; se— Joan. c. 14, y 21, 23, 2%; I. Joan. c., y 20 y 21.
gun S. Agustin, Dios se las ha inspirado muchas Esto es á lo que debennos atenernos.
veces á los paganos, y se las ha recompensado. Algunos incrédulos han llevado la pertinacia hasta
L. de gratia hristi, c. 24, n. 25; in ps. 68, serm. sostener que es imposible amar á un Dios, tal como
2.", núm, 3.; epist. 93 ad Vincentrogat, n.° 9, l. ; la religion nos le presenta, es decir, un Dios terri
contra duas epist. Pelag. c. 6, n.° 13; de civit. Dei ble que castiga el crimen, por toda la eternidad.
l. 5, c. 19 y 24. Esta es la doctrina terminante de Mas si Dios no castigara el crimen, sobre qué fun—
la Sagrada Escritura, Esth, c. 1, y. 13; c. 15, y. daríamos la esperanza de que recompensara la vir
11; Esdr. c. 1, y. 1; c. 6, y. 22: c. 7, y.27; Ezech. tud? Esta doble funcion es el carácter esencial de
c. 29. y. 18 y sig. etc. Ahora bien, Dios no puede un Dios, legislador, y la una no puede entrar sin la
ni recompensar pecados. otra en la nocion de la justicia. Si no hubiera que
Entre los motivos laudables de nuestras acciones temer una justicia divina, este mundo no seria ha
unos son naturales, y otros sobrenaturales; y entre bitable, solo los criminales serian los dueños; la vir
estos últimos existen otros ademas de la caridad pro tud se encontraria sin esperanzas y sin motivos que
iamente dicha. Los motivos naturales laudables ta la movieran á obrar. Dios no seria digno de ser ama
es como la piedad y conmiseracion, el amor á nues do por los buenos, si no fuera temible para los crimi
tros prójimos y á la patria, los sentimientos de honor, nales.
etc. son un egercicio lejítimo de las facultades que Concebimos muy bien que un mal corazon que po
Dios nos ha concedido y de las clinaciones que nos ne toda su felicidad en satisfacer pasiones viciosas no
ha dado; estos motivos pueden acer las acciones de puede amar á Dios. Mas le es util el temerle; y cuan
un pagano dignas de recompensa en este mundo, do llegue el caso de resolverse á colocarla en la vir
puesto que no puede ser recompensado de ellas en el tud la encontrará tambien en el amor de Dios.
otro. Creer que las acciones de un cristiano hechas CARII)AD. Se toma tambien por el amor que Dios
por los mismos motivos le serán meritorias en el otro manifiesta á los hombres. Dios, dice S. Pablo, nos ha
mundo por un privilegio afecto al caracter de cris dado á conocer su caridad respecto de nosotros en
tiano, y por la participacion de los méritos de Je que Jesucristo ha muerto por nosotros, cuando éra
sucristo, seria aproximarse mucho al semi-pelagia mos todavia pecadores; Rom. c. 15, y. 8. De la mis
nismo; pero de que no sean meritorias, no se sigue ma suerte que la caridad de Dios para con nosotros
que sean pecados. se manifiesta por los beneficios que nos hace, as: nues
En un cristiano, los motivos naturales no esclu tro amor para con Dios y el prójimo debe probarse
¿? los sobrenaturales, aunque no podemos perci por nuestras buenas obras.
CARIDAD PARA CON EL PROGIMO. Jesucristo
-

ir al propio tiempo muchos motivos diferentes. Unas

veces obrará primero la humanidad, y otras la ca renovó la ley: Amareis á vuestro prógimo como ávos
ridad; mas el cristianismo puede pasar de uno de estos otros mismos. Esplica lo que entiendebajo el nombre de
motivos al otro, recordarlos sucesivamente, y san prógimo comprendiendo en él aun los estraños y los
tilicar uno por el otro. En este caso, la accion es enemigos. Luc. c. 10, y.29. Nos enseña en qué con
 CAR 339) CAR
siste este amor: Haced á los demas lo que quisierais ros, las casas de educacion, para ambos secsos, de
hicieran á vosotros mismos. Luc. c. 6, y.31. Propónese trabajo para todas las edades, de retiro para las
él mismo por modelo: Amaos los unos á los otros ¿ enfermas, las escuelas de caridad, las co
como yo os he amado. Joan. c. 13, y.3%. Nos mani radias que asisten á los pobres, prisioneros y crimi
fiesta el motivo. A mad, á vuestros enemigos, a fin de nales condenados á muerte, las fundaciones de limos
que seais los hijos del Padre celestial que hace bien á nas; los montes de piedad, la redencion de cautivos,
todos. Mat. c. 5, y.5. Podia esplicar mejor el pre etc. Todo es la obra de la caridad cristiana.
cepto de la caridad? Uno de nuestros filósolos incrédulos conviene en
Este precepto encierra, pues, no solo los sentimien que solo en la ciudad de Roma hay por lo menos
los de benevolencia, sino todas las acciones que la cincuenta casas de caridad de toda clase; todavía se
rueban, los beneficios, los ausilios, los consejos, podrá contar mayor número de ellas en París y á
a dulzura, la conmiseracion, la indulgencia respecto proporcion sucede lo mismo en las demas ciudades
de las faltas de los demas, el olvido de las injurias, del reino. De esto se deduce que el hombre no es ma—
el temor de humillar y contristar á nuestros seme lo naturalmente sino bueno y bienhechor. Lo es sin
jantes; todo esto lo exigimos para nosotros, si se nos duda alguna cuando la religion viene en su ausilio;
rehusa nos quejamos; luego se lo debemos á los mas por qué esta bondad no se manifiesta de la mis
demas. -
ma suerte con tanto brillo como en el cristianismo?
Algunos incrédulos han dicho que estas máximas Nuestros filósofos no nos han dado razon de esto.
delevangelio se encuentran oscurecidas por otras, co En nuestros dias se ha querido sustituir al término
mo cuando se dice que un discípulo de Jesucristo debe caridad el de humanidad, pero todavia no hemos
aborrecer á su padre, á su madre, á sus parientes, visto á ningun filósofo consagrarse por humanidad á
á su muger, á sus hijos, hasta su propia vida por Dios las buenas obras de que acabamos de hablar; cuando
y por el Evangelio. Estas últimas palabras debieron la humanidad filosófica haya hecho lanto bien como
abrirles los ojos. Qué es aborrecer su propia vida sino la caridad, veremos cuál de las dos merece la prefe
estar pronto á sacrificarla cuando sea necesario para rencia. La pompa con la cual la humanidad anuncia
obederá Dios y para dar testimonio del Evangelio? al público sus liberalidades, es ya de muy mal
Luego, aborrecer á su padre y su familia es tambien agüero.
estar prontos á dejarlos cuando Dios lo manda, para Todavia se ha hecho mas : nuestros diserladores
ir á predicar á paises lejanos el Evangelio. Hé aqui á políticos han tratado de desacreditar todas las funcio
lo que estaban obligados los apóstoles, y lo que Jesu nes y establecimientos de caridad como institucio—
nes imprudentes y perniciosas ; que producen mas
cristo tenia derecho á exigirles. Mas los apóstoles no
pudieron dar mas pruebas de afecto á sus parientes mal que bien, que son la obra de la ignorancia y la
que asegurándoles la proteccion de un bienhechor tal vanidad: refutaremos sus reflexiones en otra parte.
como Jesucristo. Véase FUNDACION, HosPITAL.
Una prueba que demuestra que las máximas del Seria un error muy grosero el limitar los deberes
Salvador fueron bien entendidas es la caridad univer— de la caridad al solo precepto de la limosna; pero es
sal y heróica de los primeros cristianos. «Conocemos, todavía mas escandaloso el enseñar, como se ha he—
dice S. Clemente de Roma, á muchos de entre nosotros cho, que la limosna no es un precepto rigoroso sino
que se han puesto las cadenas para sacar á los que un simple consejo. Es la humanidad la que ha dic—
estaban en ellas; muchos se han hecho esclavos, y tado esta decision?
han ¿? el precio de su libertad en alimentar Se objeta que la limosna alimenta la holgazaneria
á los pobres.» Epist. 1." núm. 7. Muchos arrostraron y sostiene con recuencia el libertinaje de los pobres.
la muerte para prestar ausilios á los mártires. Duran Sea asi. Si antes de hacer una buena obra se trata
te la peste que asoló el imperio Romano en 252, ra de preveer los diversos abusos que de ella pueden
que duró diez años, los cristianos cuidaban no solo de seguirse, los inconvenientes que puede haber, el mé
sus hermanos sino de los paganos, mientras que es rito ó indignidad de los que se hayan de aprove
tos abandonaban á sus enfermos. Eusebio Hist. ecles. char de ella, etc. jamás se haria ninguna, pues que
l. 7, c. 22; Ponce, vida de San Cipriano. Juliano de todas se puede abusar. La malicia humana en—
conviene en que los cristianos alimentaban á sus po cuentra siempre mas medios para hacer mal, que la
bres y á los del paganismo. Carta 9 á A sarce. S. Juan caridad mas prudente para tomar precauciones de
Crisóstomo atestigua que su caridad es la que contri prevenirle. -

buyó para convertir á los paganos. Prefacio sobre la Cuando Dios juzgue nuestras obras, nos pedirá
epístola á los filipenses. cuenta del bien que hemos podido hacer, y no del
Durante la peste negra del año 138, se vió á las mal que no hemos podido impedir. Es preciso que
religiosas hospitalarias y á los religiosos renovar los tengamos presente la leccion de S. Pablo: «hacer
ejemplos de caridad heróica de que habló S.Cipria bien sin cansarnos y con el mayor agrado». Gálat
no; se han visto obispos que vendian hasta los vasos c. 6, y 9; II Thess. c. 3, y.13; y dejará Dios y á les
sagrados para rescatar esclavos. • a « º que ocupan su lugar en la tierra el cuidado de casti
La perseverancia de esta virtud en el cristianismo gar y reprimir el mal. Véase LimosNa.
está probada por la multitud de establecimientos de Un deista célebre ha comprendido que los debe—
caridad que en él subsisten, de lo que no han dado res de la caridad no se limitan á hacer limosna: cuán
ejemplo las naciones infieles. Hospitales para los en tos desgraciados, dice, cuántos enfermos tienen mas
fermos, los ancianos, los incurables, los espósitos, los necesidad de consuelo que de limosnas Cuántos opri—
huérfanos, los inválidos, los enagerados y los viaje midos á quien la proteccion les es mas útil que el di
 CAR 340) CAR
nero Poneden paz á los que se querellan, evitad los hospicios solo en la ciudad de París en donde llena
pleitos, aconsejad á los hijos que cumplan con sus los diversos objetos de su fundacion. A proporcion
deberes, á los padres la indulgencia; favoreced los tiene otras en las demas ciudades del reino, asi como
matrimonios felices, impedid las vejaciones, emplead, en Alemania y en Polonia, en todas partes estas jó
prodigad el crédito de vuestros amigos en favor del venes virtuosas hacen que se bendiga la memoria de
débil á quien se niega la justicia, y es oprimido por el los fundadores. -

deroso; declaraos el protector del desgraciado; sed Deben comprenderse bajo el nombre de hijas de la
justo, humano, bienhechor; no hagais solo la limos caridad otras muchas congregaciones que llenan las
na, sino ejerced en un todo la caridad; las obras de . mismas funciones que estas, tanto en Francia como en
misericordia alivian mayor número de males que el las demas partes. V. Hospit ALARIAs.
dinero; amad á los demas y sereis amados; servidles CARIDAD (SENORA DE LA). Se llaman asi en
y os servirán; sed su padre y seran vuestros hijos. las diferentes ciudades del reino, las señoras piado—
Seria muy facil hacer ver que la Sagrada Escritura sas que se reunen para ocuparse de los medios de ali
nos manda con especialidad todos estos deberes de ca viar á los pobres, para recoger las limosnas que hacen
ridad, y que sin estas lecciones divinas, no conoce ó procuran, y para distribuirlas con discrecion.
riamos mejor la moral que los antiguos filósofos, á los Si el ejemplo de los soberanos escapaz de dar cier
cuales echa en cara Lactancio el no haber prescri to rea'ce á una obra, esta se ha hecho mas respeta
to estos mismos deberes con ningun precepto. Divin. ble por esta razon. Todos los meses tiene la reina una
inst. l, 10, c. 6. reunion de caridad en su palacio; por su ejemplo y
CARIDAD. Es el nombre de muchas Ordenes re pidiendo ella misma por los pobres, hace que las da
ligiosas. La mas conocida entre nosotros es la de los mas de la corte den limosna; y la remite á los cu
hermanos de la caridad, instituida porS. Juan de Dios ras de las parroquias para su distribucion.
para el servicio de los enfermos. Leon X la aprobó Por precauciones que se tomen para poner á cu
como una simple sociedad en 1520; Pio V. la conce bierto de toda acusacion esta manera de ejercer la
dió algunos privilegios; Paulo IV la confirmó en 1717 caridad, es raro que se consiga, con frecuencia da
en calidad de Orden religiosa. Ademas de los tres vo lugará murmuraciones. Se dice que en las investiga
tos de obediencia, pobreza y castidad, estos religiosos liones que se hacen para conocer las necesidades y
hacen voto de emplearse en el servicio de los enfer la conducta de los pobres, entra la curiosidad y la
mos. No hacen ningun estudio ni reciben las órde imprudencia, que hay cierta predileccion en la dis
nes sagradas; si hay algum sacerdote entre ellos, no tribucion de las limosnas, que con frecuencia se les
puede obtener ninguna dignidad de la Orden. El niega a los que son mas dignos de ellas, y se prodi
B. Juan de Dios, su fundador, todos los dias iba á pe— º los que menos las merecen, etc. Hasta dónde no
dir para los enfermos diciendo en alta voz: Herma la temeridad y malignidad de los malos jui
nos mios, haced bien por el amor de Dios; esta es la ra C10S
zon porque en Italia les entienden bajo el nombre de Esta es la suerte de todas la buenas obras, el ser
fateben, fratelli. censuradas; pero estas jamás deberian salir de la plu
A pesar de las prevenciones de los filósofos incré ma de los filósofos que se tienen por los defensores de
dulos contra las Ordenes religiosas en general, nola moral y de la humanidad, Será preciso abstener
han podido menos de hacer los mayores elogios de se de hacer bien, por temor á ser vituperado? No,
esta. Parece haber sido instituida espresamente en el sin duda que no. S. Pedro dice á los fieles: «Obser—
origen del protestantismo para demostrar contra los »vad una conducta prudente en medio de los enemi
reformadores la utilidad y necesidad de los votos »gos de la religion, á fin de que aquellos mismos que
monásticos. Hombres con sueldo harian unos servi »os pintan como malhechores, se vean obigados por
cios tan constantes, tan generosos y puros como los »el exámen de vuestras buenas obras á glorificará
hermanos de la caridad? Y sin el voto con que se » Dios». I, Petr. c. 2, y . 12.
obligan á ello tendrian valor para emplearse toda su
vida en tales obras? Caridad (Orden de Nuestra seño -
La pretendida reforma, con sus bellas ideas de per ra de la). Es una Orden de religiosas que viven
feccion, ha encontrado medio de suplir las buenas bajo la regla de S. Agustin, y hacen un voto particu
obras practicadas por los religiosos hospitalarios? lar de ocuparse en la instruccion de algunas jóvenes
Hay otras Ordenes como estas y que hacen los mis educandas, y mugerespenitentes que quieren retirar
mos servicios; hablaremos de ellas en su lugar. No se por algun tiempo á un monasterio.
ha sido la filosofía la que las fundó, sino la caridad Al P. Eudes, hermano de Mezera é historiógrafo de
cristiana. V. HosPITALAR10s. Francia, es á quien se le reconoce por fundador de
CARIDAD (HERMANAS DE LA). Comunidades esta Orden. Cuando estaba predicando las misiones en
de jóvenes instituidas por S. Vicente de Paul, con el los años 1638,39 y 0 logró tantos frutos, que muchas
ausilio de Mme. Le Gras, para asistir á los enfermos jóvenes y mugeres de todas edades le suplicaron las
en los hospitales y en las casas particulares, visitará procurase un sitio de asilo para hacer penitencia en
los prisioneros, educar los niños espósitos y enseñar él, manifestando que la necesidad habià tenido mu
á las niñas pobres. No hacen mas que votos simples cha parte en su vida desarreglada.
y por un tiempo limitado, pueden separarse de la con Aquel virsuoso eclesiástico les indicó por el pronto
gregacion cuando lo crean oportuno. para reunirse la casa de una muger que se llamaba
Este institulo, uno de los mas útiles que se han es Margarita l“Ami, y despues resolvió fundarles un
tablecido jamás, cuenta un gran número de casas ú convento en la ciudad de Caen, en la Normandía, en
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donde se encerraron en el año 16' 1 con otras varias Inocencio IV las reformas y alteraciones que habian
jóvenes devotas; pero como no estaban obligadas con hecho en ella. Hasta que se hizo la paz enire el em—
ningun instituto particular, y la mayor parte de ellas ¿ Federico II y los sarracenos en 1229, no se
dejaban aquella vida despues de algún tiempo, pare abia estendido la Órden de los carmelitas fuera de
ció conveniente el que las reemplazasen unas religio la Tierra Santa. Las persecuciones que sufrieron fue—
sas, que haciendo los tres votos solemnes de la regla ron causa de buscar un asilo en Europa, y así se es
de S. Agustin, se tomasen el trabajo de la conversion tendieron muchos religiosos por las islas de Chipre y
de las penitentes, y para ello se solicitaron los rea Sicilia, por la Inglaterra, y vinieron á Marsella y
les despachos de Luis XIII en el mes de noviembre otras partes. San Luis, al volver de la Tierra Santa,
de 1642. trajo consigo algunos de ellos, y los estableció en
Se trató del hábito que deberian tener, y se resol Paris en 1259, y de aquel convento se formaron los
vió fuese blanco para denotar la gran pureza que pro de Francia y Alemania.
fesaban, llevando sencillamente un velo negro, y en el Los papas concedieron á esta Orden los mismos
escapulario un corazon de plata que tenia grabada la privilegios qu á las mendicantes, aunques les está
imagen de nuestra Señora con el niño Jesus en los permitido el poseer bienes raices. Ha estado agre
brazos. gada á la Universidad de Paris, , y se ha hecho
El papa Alejandro VII erigió esta congregacion en célebre por los obispos, los predicadores y escritores
Orden religiosa por una bula de 22 de enero de 1666. que ha dado á la Iglesia. Cuando pasaron del Orien
Despues se han fundado varias casas de esta congre te á ¿ traian unas capas barreteadas ó mezcla
gacion en varios parages, especialmente en Rennes, das de color blanco y pardo, por lo que los llamaron
en 167%; en Guingamp, en el obispado de Trequier barreleados. Algunos escritores suyos han pensado
año de 1678 y en Vannes en 1683, etc. (Estracto del que la estrañeza en el color de sus hábitos estaba
Diccionario de Jurisprudencia). fundada en que la capa que Elías arrojó á su dis
Carlostadianos. V. LUTERANos. cípulo Eliseo cuando fué arrebatado en un carro de
fuego se habia puesto negra en lo esterior, conser
Carmelita. (Derecho eclesiástico). Es un re vando su blancura natural por dentro, y en los plie
ligioso de nuestra Señora del Monte Carmelo. Trae su ¿ que hacia. Despues del capítulo general cele
origen del Carmelo, que es una montaña de la Siria rado en Mompeller en 1287, dejaron aquellas capas
que habitaron antiguamente los profetas Elias y Eli de mezcla, y se vistieron con una ropa negra, un
seo y los hijos de los profetas. Algunos autores car escapulario y capucha del mismo color, y por enci
melitas de pocos conocimientos y poco versados en ma una capa mas grande con su muceta de color
la crítica, pretendieron que la fundacion de su Orden blanco. No olvidaremos decir, como de paso, que to -
traia su origen del profeta Elias , y que descendia maron el escapulario, porque segun dicen sus auto
por una sucesion no interrumpida de aquel mismo res, la Santísima Vírgen se lo habia manifestado
profeta y sus discípulos, y aun uno de ellos lo ha algunos años antes al bienaventurado Simon Estock
defendido en unas conclusiones particulares, impre su sesto general, y con este motivo han fundado, y
sas en Beziers, que se encuentran en las noticias de aun subsisten en sus conventos, las cofradías del
la república de las Letras, de Bayle. Fueron causa escapulario.
estas pretensiones de una disputa muy animada entre La Orden de los carmelitas se aumentó muchísi
los carmelitas y los jesuitas, tanto que el papa Ino mo. En el dia está divida en dos ramas, los de la
cencio XII se vió precisado á imponer silencio á las antigua observancia, que se llaman tambien los an
partes en su breve de 20 de noviembre de 1698. Al tiguos carmelitas ó los mitigados, porque los papas
gunos autores dan por supuesto que Jesucristo fue su Inocencio IV, Eugenio IV y Pio II suavizaron la aus
fundador inmediato: otros se han imaginado que Pi teridad de su regla; y los de la estrecha observan
tágoras habia sido carmelita, de un modo natural, y cia, que siguen la reforma introducida en 1635, y
sin ausilio de la metempsicosis, y otros creen que confirmada en 1638 por el papa Urbano VIII. Los
nuestros antiguos druidas de las Galias eran una rama carmelitas de la antigua observahcia componen trein
ó renuevo de esta Orden; ¿ dejemos á un lado las ta y ocho provincias bajo el gobierno de un general
fábulas para seguir inmediatamente la verdad de la que tiene su residencia ordinaria en Roma en el
historia. Focas, monge griego, que vivia en 1185, convento de Santa María, del otro lado del Tiber,
dice; que en su tiempo se conservaba todavia sobre el y lo eligen cada seis años. Este convento, asi co—
monte Carmelo la caverna ó cueva de Elias, y á su mo el de San Martin de los Montes en la misma
lado habia algunas ruinas de un edificio que parecia ciudad y el de la plaza Maubert en Paris, y el
haber sido monasterio: que despues de algunos años del monte Olivete estan sujetos inmediatamente al
un monge anciano, sacerdote de la Calabria, se esta general, y no pertenecen á ninguna de las trein
bleció alli porque decia que habia tenido una revela la y, ocho provincias. La congregacion particular
cion del profeta Elias, y llegó á reunir hasta unos de Mántua que abrazó la reforma en el año 133,
diez compañeros. Alberto, patriarca de Jerusalen, constituye parte de la Orden de los grandes car
les dió una regla, en 1209, que fue aprobada por el melitas y está sometida al mismo general; tiene
papa Honorio III, la hizo imprimir el P. Papebro cincuenta, y cuatro conventos bajo la direccion in
quio; pero empezaron á manifestarse algunos escrú - mediata de un vicario, general. Los individuos de
pulos entre los religiosos sobre el modo de observarla, esta congregacion se diferencian de los otros carme
y hubo que nombrar unos comisionados apostólicos litas, en cuanto al vestido, en que los reformados
que la esplicasen y corrigiesen, y despues aprobó llevan sombrero blanco.
tomo 1. l,9
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32
Los carmelitas de la estrecha observancia forman 1600 dividió á los reformados en dos congregaciones
dos congregaciones diferentes, que tiene cada una su con dos generales diferentes, uno para Italia y otro
general. La de España, que tiene ocho provincias para España. Lo que dió motivo á esta division fue la
sujetas á un general particular, y la otra que está pretension de los españoles, que sostenian que la re
en Italia, en donde reside su general, reune doce forma de Santa Teresa debia limitarse únicamente á
provincias en aquel pais y en otras partes de Euro— España. La vida de los religiosos reformados es bas
pa. Cuando se trató de ejecutar el edicto de 1768, tante austera, y se aproxima á la de los cartujos.
en cuanto á las Ordenes religiosas, los antiguos car— Reciben hermanos que llaman conversos, los cuales
melilas de Francia pidieron al rey que les permitiese tienen dos años de noviciado, y concluidos hacen
reunirse en Paris en el convento de la plaza Mau— solo los votos simples. Si permanecen cinco años en
bert, y ¿ para ello se nombrasen dos diputados la Orden, se les admite á otro segundo noviciado de
en el capítulo de cada provincia, á lin, de adoptar un año, y concluido este, hacen la profesion solem
las medidas necesarias para que todas las casas de ne; pero si permanecen seis años en la Qrden sin pe—
esta Orden que hay en el reino se gobernasen por dir la segunda profesion ya no son recibidos despues
la misma regla, y tuviesen un mismo espíritu. La y quedan en el estado que tenian, obligados solamen
reunion se autorizó por un decreto del consejo de 2. ie con sus votos simples. Es cosa muy digna de no
de febrero de 1769, y la verificaron los religiosos en tarse que los carmelitas descalzos tienene en cada
el mes de julio de 1670, modificando en ella sus cons rovincia un sitio retirado que llaman su desierto,
tituciones. Entre estas modificaciones habia una acer independiente de los demas conventos, para recoger
ca de los graduados, que alarmó á todos aquellos que se mas particularmente en algunas ocasiones, y prac
habian vivido hasta entonces sin haberse graduado; ticar todas las virtudes de la vida solitaria, reani
pero á representacion del general, el rey dió un de mando de este modo el fervor monástico. En Norman
crelo para tranquilizarlos en 27 de setiembre de 1775, dia tienen el de Louvier, fundado en 1660 por Luis
en el cual mandó S. M., que en las provincias de la el Grande. No pueden pasar de veinte los religiosos
Orden de los antiguos carmelitas en que el privile que habiten estos desiertos: no se permite entrar en
gio de los graduados no tenian efecto antes de la reu ellos á los novicios, á los recien profesos, á los en—
nion del año 1770, los religiosos no graduados que fermos, ni á los que tienen poca disposicion para el
hubiesen profesado anteriormente á las nuevas cons ejercicio de la vida espiritual. Ningun religioso puede
tituciones de la Orden continuasen en gozar, durante estar allí menos de un año: pero hay cuatro qué per
su vida, el mismo rango, los mismos honores y pre manecen toda su vida con el fin de perpetuar niejor
cedencias que gozaban en virtud de las antiguas cos los usos, y servir de ejemplo á los nuevos solitarios.
tumbres. Se guarda entre ellos un silencio rigoroso, y despues
CARMELITA DESCALZO. (Derecho eclesiástico). que se concluye el tiempo que ha pensado eslar el
Dan este nombre á los religiosos carmelitas reforma— solitario le envian á un convento exhortándole á
dos porque van con los pies descalzos. Esta reforma que no olvide las lecciones de virtud que ha visto
la empezó y concluyó en el siglo XVI Santa Teresa, praclicar. -

restableciendo la asteridad de la regla, primero en Las constituciones no permiten que los seglares de
los conventos de monjas y despues en los de religio— cualquiera condicion que sean vayan á visitar estos
sos, ausiliándola, en este designio el P. Antonio de desiertos, como no hayan cooperado y contribuido á
Jesus y san Juan de la Cruz, religioso carmelita. Es— su fundacion; y aun á los religiosos de la congrega
te último sufrió gran persecucion de parte de los car cion está prohibida la entrada si no tienen por es—
melitas mitigados, que lo encerraron en uno de sus crito el permiso del general ó del provincial. Sin em
conventos, donde murió oprimido de trabajos el 14 bargo, el superior del desierto puede recibir por de
de diciembre de 1591, y Clemente X le canonizó en recho de hospitalidad á los religiosos de otras Orde
1675. El encarnizamiento de sus enemigos no pudo nes sin necesidad de permiso; y aun puede darles el
contener su reforma, porque viviendo él se admitió cubierto por una noche solamente en su recinto. Aun
en las Indias, y despues de su muerte se estendió que los carmelilas descalzos han manifestado siem
por toda la Francia, los Paises-Bajos y toda la cris pre mucho celo en los ejercicios de la vida monásti
tiatidad. Los conventos de esta reforma permanecie— ca, no dejó de introducirse la relajacion en algun mo
ron interinamente bajo la obediencia de los antiguos do entre ellos sobre algunos puntos de su instituto
provinciales mitigados; solo tenian unos priores par primitivo; y como en todos liempos han vivido reli
ticulares para mantener la nueva disciplina; y asi giosos llenos de fervor, que desean conformar su vida
subsistieron hasta el año de 1580 en que Gregorio XIII, con el rigor de la regla que han abrazado, y no pue
á peticion de Felipe II, rey de España, separó ente— den practicarlo en las comunidades donde se ha intro
ramente los reforinados de los mitigados, dando á ducidola relajacion, sin hacerse odiosos en cierta ma
los primeros un provincial particular, pero dejándo— nera á los que no tienen valor de observar las mismas
los sujetos al general de toda la Orden. Sixto V, en austeridades, así tambiem hubo algunos carmelitas
1587, viendo que los reformados se multiplicaban descalzos que, deseando con ardor vivir segun las
considerablemente, mandó se dividiesen en provin reglas primitivas de su instituto, interesaron el año
cias, permitiéndoles que tuviesen un vicario general. de 1762 á la hermana Luisa Maria de Francia, reli
Subsistieron asi hasta el año 1593, en que Clemente giosa carmelita de S. Dionisio, para que pidiese á
VIII hizo una separacion mas especial entre los re Luis XV su proteccion en un objeto tan piadoso y lan
formados y los mitigados, permitiendo á aquellos útil al bien de la religion, designando para este fin el
que eligiesen un general. Este mismo papa en el año convento de Charenton de la misma Orden en la dió
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cesis de París, para reunir en él todos los religiosos profesó madama Luisa de Francia con beneplácito y
que quisiesen seguir perpétuamente la regla de su consentiminto de Luis XV. No están limitados los
instituto primitive. El rey escuchó favorablemente la conventos en Francia como en España á recibir un
eticion, y solicitó un breve del papa, en que les da cierto número de religiosas, y es muy de notar que
a la facultad de reunirse en el convento de Charen no se hayan apartado de la observancia regular que
ton para vivir en él segun su primer instituto. Este rofesan. Su fundacion y establecimiento en el reino
breve se autorizó con los despachos reales el de a confirmó un breve de Urbano VIII del año 1623,
mayo de 1772, que fueron registrados en el parla autorizado con los despachos reales en 1624, los que
mento al dia siguiente. (Estracto del Diccionario de mandan se ponga en ejecucion aunque solo está au
Jurisprudencia). - torizado por el consejo de Estado de S. M. La eleccion
de superiores en esta Orden fue motivo de muchos
S& Carmelita (Derecho eclesiástico). Es una altercados por espacio de algun tiempo. A su legada
religiosa que vive bajo la regla ó instituto del monte á Francia no habia establecimiento alguno de carme—
Carmelo, segun la reforma introducida por Santa litas descalzas, y por consiguiente el Papa nombró
Teresa. algunos superiores, entre otros al cardenal de Berulo,
Abrazaron las reglas delas Ordenes de Sto. Domin despues el general de los carmelitas pretendia serlo,
go y S. Agustin algunas personas del bello sexo, y y en efecto, fue autorizado como tal por una sentencia
en todas partes habia religiosas que las observaban. del arzobispo de Burdeos dada el año 1620; pero
Animado con este ejemplo el biénaventurado Juan Palo V y Gregorio XV confirmaron los superiores
Soret, religioso carmelita, quiso que hubiese algunas nombrados anteriormente. En 166 el Papa nombró
religiosas que siguiesen el instituto del monte Carme— como visitador de las carmelilas al superior general
de la congregacion de la Mision, y en otro breve per
lo, y logró fundar cinco conventos, siendo uno de ellos
el de Vannes, en la Bretaña; y Nicolás V aprobó la mitió á las religiosas establecidas en París en la ca
ejecucion de su proyecto con una bula del año 152. lle del Chapon, en Pontoise y en San Dionisio, que
Las hijas de este instituto tienen el mismo hábito que eligiesen cada tres años un rector ó superior inme
los religiosos de su Orden, y consta de una túnica y diato, que deberia ser confirmado por el nuncio re
un escapulario de paño de color pardo oscuro: en el sidente en Francia, ó por el ordinario diocesano, co—
coro se ponen encima una capa blanca con el velo mo delegado del Papa, con la condicion de que el
negro. rector no pudiese mezclarse en hacer la visita, ni los
En 1536 Santa Teresa, religiosa del convento de visiladores usurpasen las funciones del superior si
Avila en Castilla, emprendió la reforma de las reli no en el caso de abuso ó mala versacion de parte de
giosas de su Orden, y aunque tuvo muchas contra— unos y otros. El Papa hizo al mismo tiempo varios
dicciones logró formar unas constituciones adecuadas reglamentos concernientes á la clausura, los locuto
á su nuevo instituto, que las aprobó el papa Pio IV rios y admision de novicias. Estos breves fueron
en 11 de julio de 1562. Las carmelitas reformadas acompañados de los despachos reales correspondien -
de España estan sujetas en unas partes á los superio— tes, y se mandaron ejecutar, no obstante cualquiera
res de la Orden, y en otras al obispo diocesano; en oposicionó apelacion, cuyo conocimiento se reserva—
las ciudades algo considerables no deben tener rentas, ba el rey. (Estracto del Diccionario de Jurispru—
y solo viven de limosnas. En los monasterios que tie dencia).
nen rentas no pueden recibir mas que catorce reli
giosas, á no ser que las que entran demas de este nú Carmelo. Hay dos, montes en la Palestina que
mero traigan con que vivir, pero nunca pueden pa llevan este nombre, uno al mediodia cerca de llebrón.
sar de veinte, contando las hermanas conversas. Solo el otro mas hácia el norte cerca de Tolemaida. S. Ge
tiene efecto este número fijo en los conventos que tie rónimo dice que era un lugar plantado de viñas muy
nen rentas y estan sujetos á los superiores de la Or— fértiles y agradable; in Isaiam c. 16, y. 10. Muchas
den, porque en los que estan bajo la inspeccion de veces se usa este nombre en la Escritura para espre
los ordinarios no está designado el número de re sar la fertilidad y abundancia. En el segundo de es
ligiosas. los montes es en el que el profeta Elías y su discípulo
En los conventos que no tienen rentas, es preciso Eliseo habitaron, pero nada prueba que haya sidó un
que vivan las religiosas en la mayor pobreza, y el lugar de devocion. La cofradía de Nuestra Señora del
número de las de coro no puede pasar de trece. Las Monte Carmelo o del Escapulario es conocida desde
religiosas llevan una túnica y escapulario de color fines del siglo XIll V. EscApULARio.
pardo oscuro, con una capa blanca de una tela de
sarga muy burda; estan calzadas con sandalias ó al Carne. Se toma en la Sagrada Escritura, no solo
¿a y las medias son de la misma sarga del há en el sentido propio, por la carne del hombre y de
ito. Su género de vida es muy austero; comen de los animales, y por todo el cuerpo humano, como
viernes contínuamente, y ayunan desde 1 de se cuando decimos la resurreccion de la carne, que en—
tiembre hasta pascua. En Francia se introdujo esta lendemos la resurreccion del hombre en carne y hueso
Orden por el celo de la hija del señor Aurillot, conta— sino que ademas tiene otros muchos sentidos metafó—
dor en París, el cual interesó al cardenal de Berulo, ricos ; significa: 1.º Los seres animados en general.
superier general del Oratorio, á que fuese á buscar Dios dice, Gén. c. 6, y, 17: voy hacer morir toda car
él inismo algunas religiosas á España, y tienen cerca ne, es decir, toda criatura viviente. 2.º El hombre en
de sesenta y dos conventos en el reino, de los cua— general. Ibid. y . 12. Toda carne habia corrompido su
les har tres en París y uno en S. Dionisio, en donde camino, es decir, toda criatura humana de uno y otro
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344)
sexo se habia entregado al crímen. c. 2, y.24. El hom con verdad que su carne es verdaderamente un ali
bre y su muger serán dos en una misma carne, serán mento y su sangre una bebida; seria la fé la que ali
reputados como una misma persona. Isaias, c. 58, mentara nuestra alma y no la carne de Jesucristo.
y.7. Cuando veais un pobre reducido á la desnudez Muchos hereges del siglo II, Bardesanes, Basili
des, Cerdon, Cerintho, los docelas y la mayor par
volvedle á vestir, y no desprecieis vuestra carne, un
hombre semejante á vosotros. En este sentido el ver te de los gnósticos decian que el Hijo de Dios hecho
bo se hizo carne, se hizo hombre. Eccl, c. 25, y. 36. hombre no habia tenido una carne real sino solo apa
Alejad de vuestras carnes una muger libertina, es de rente; que así nació, murió y resucitó solo en apa
cir, separadla de vosotros. 3." Los sentimientos na riencia. Los Padres de la Iglesia refutaron este error
turales á la humanidad, Jesucristo dice á S. Pedro, contra el que S. Juan Evangelista habia prevenido ya
Mat. c. 16, y . 17. No es la carne ni la ¿ la á los fieles, Joan c. , y.2; II Joan. y.7; fué reno
que os ha revelado quien yo soy, no habeis sacado es vado en el siglo III por los marcionitas que negaban
te conocimiento de las luces y sentimientos de la na tambien la resurreccion futura de la carne; Tertu
turaleza. Segun S. Pablo, l. Cor. c. 15, y, 50, la car liano escribió contra ellos sus libros de Carne Christi,
ne y la ¿ no pueden poseer el reino de Dios; no de Resurrectione carnis.
se llega á él por los afectos y acciones á que nos inclina CARNES IMPURAS. Véase ANIMALES PURos ó IM
la naturaleza. ..." La carne significa los lazos de la PUR9S.
sangre; los hermanos de José dicen de él, Gén. c. 37, CARNES INMOLADAS. Véase VICTIMAs, lDoLo
y. 27: «Es nuestro hermano y nuestra carne; hemos TITAS. -

nacido de la misma sangre. 5." Las afecciones de fa CARNE. Moisés mandó á los judios la abstinencia
milia, S, Pablo dice, Gal. c. 2, y. 16: «No he dado de muchas carnes, les prohibió el comer animales re
mi asentimiento ála carne y á la sangre; no hesegui putados impuros, la earne de un animal muerto por
do mi afeccion natural respecto de mis parientes y de sí mismo, la de un animal sofocado sin que corriera
mi nacion.» 6.º Las inclinacioncs del hombre corrom su sangre, ó que hubiese sido mordido por alguna
pido por el pecado. Dios dice, Gén. c. 6, y 3: «Mies bestia; el que la comiera sin saberlo ó de otra suerte,
píritu no estará siempre con el hombre, porque él es estaba manchado hasta la tarde y obligado á purifi
carne, es decir, está sujeto á pasiones groseras y ver : carse. Tenian tambien gran cuidado de quitar el ner
gonzosas.» Segun S. Pablo la carne combate contra el vio de la pierna de los animales que querian comer á
espíritu, y el espíritu contra la carne; Gálat. c. 5, }. causa del nervio del muslo de Jacob desecado por un
17. Las pasiones resisten al sentimiento moral que angel, Gén. c. 32, y.32; pero esta última abstinencia
nos inclina á la virtud, y esto es lo que hace difícil su no les estaba mandada por la
práctica. «Marchar segun la carne, Rom. c. 8, }. 1, Es verdad que hay paises en los cuales ciertos ali
es seguir las inclinaciones desarregladas de la natura mentos son perniciosos; muchos naturalistas han no
leza corrompida.» 7." La carne se toma por las partes tado que la sangre de los animales y el puerco fresco
del cuerpo que oculta el ¿ Levít. c. 29, y 10. En en algunas partes del Asia causan enfermedades de
este sentido la lujuria se llama pecado de la carne, Gá la piel á los que se alimentan de ella, y en algunas na
lat., c. 5, y. 19.8º S. Pablo usa de este término pa ciones asiáticas se abstienen de ella por policía lo
ra significar un culto esterior y grosero, Gal. c. 3, mismo que los judios. Se dice que la plica, enferme
3.3: reprende á los Gálatas por haber empezado por dad cruel, se desarrolla en los tártaros que se alimen
el espíritu y concluido por la carne; el haber abraza. tan de la sangre y earne del caballo cruda y corrompi
do al principio el culto espiritual del cristianismo y da, y beben leche agria de yegua; que el mal venéreo
tratar de volverá las ceremonias del judaismo, á la tomó orígen entre los americanos por comer la carne
circuncision, etc. Llama á estas ceremonias las justi de los animales muertos con flechas emponzoñadas.
cias de la carne, Hebr. c. 9, y. 10, porque era un Por una parte se sabe que el régimen dietético de los
culto puramente esterior. antiguos egipcios era por lo menos tan severo como el
Cuando Jesucristo dijo á los judios: «El pan que yo de los judios; los que lo han atribuido á motivos su
daré para la vida del mundo es mi propia carne..... persticiosos no tenian las mejores noticias. V. ANiMA
porque mi carne es verdaderamente un alimento, y LEs PUaos ó 1 MPURos.
ini sangre una bebida, etc.» Joan. c. 6, y.52, 56, En el nacimiento del cristianismo los apóstoles
se escandalizaron de esto. Con este motivo el Salva— creyeron oportuno ordenar á los fieles la ablinencia
dor añadió, y. 6 : «El espíritu es el que da la vida, de la sangre, de las carnes sofocadas é inmoladas á los
la carne no sirve de nada : las palabras que yo os he ídolos. Atc. c. 15, y. 28 y 29. Jamás hubieran con
dicho son espíritu y vida.» Por esto los calvinistas sentido los judios convertidos en fraternizar con hom
han tratado de probar que en la Eucaristia Jesucristo bres que hubiesen hecho uso de esta clase de alimen
no da real y substancialmente su cuerpo y sangre, si tos. Como esta prohibicion esta unida á la de la forni
mo que se le recibe espiritualmente por la fé, y no de cacion, término que significa algunas veces la idolatría
plra manera. ciertos críticos han dicho que todas estas abstinencias
No obstante, leyendo atentamente este , discurso eran de igual necesidad, y que aun se debian conti
del Salvador, se ve que solo quiso corregir el error de nuar observando, pues que los apóstoles dicen que
los cafarnaitas, que se figuraban que Jesucristo daba todo esto es necesario. Mas estos disertadores no han
su carne ácomer de una manera sensihle y sangrien fijado la atencion en que la ley dada por los apóstoles
a, como se come la carne de los animales; siendo asi se encontró bien pronto con muchos inconvenientes:
lue nos la da bajo las apariencias del pan y del vino. durante las persecuciones, los paganos ponian á prue
si solo nos la diera por medio de la fé, no se diria ba á los cristianos presentándoles para comer las car
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nes sofocadas y de puerco. Tertuliano, Apolog. c. 9. demas, le creian hijo de Jose y de Maria, confesa
El emperador Juliano mandó ofrecerá los ídolos todas ban sus milagros y sus padecimientos. No se les acu
las carnes de la carniceria y manchar las fuentes con sa el haber negado su resurreccion, sino la resurrec
la sangre de las víctimas, con el mismo designio. Hé cion general, y de decir que solo el alma de Jesu
aquí porqué S. Pablo, que sin duda preveia este in cristo habia subido al cielo.
conveniente, no prohibió á los cristianos las carnes Por consiguiente, pretendian que se podia igualar
inmoladas á los ídolos sino en caso de que esto pudie á Jesucristo en conocimientos, en virtudes y en mi
andaluar á sus hermanos. I. Cor. c. 10 y 25 lagros; algunos de estos sectarios se lisongeaban has
y 32. ta de sobrepujarle; y para persuadírselo á los igno
rantes practicaban la mágia, absurdo muy comun
Carolinos (libros). V. IMAGEN. entre los filósofos de aquella época.
Tal es cuadro que S. Ireneo ha hecho de estos
Carpocracianos. Secta de hereges del II hereges, l. 1.° c. 25: ninguno podia conocerlos mejor
siglo: era una rama de los gnósticos. Tuvieron por qne él porque vivió en el mismo siglo; los demas
gefe á Carpocrates de Alejandría, especie de filósofo Padres dijeron todos lo mismo.
mal instruido y peor convertido, cuyas costumbres Hé aqui una secta de pretendidos filósofos que en
eran muy corrompidas, y que queria hermanar el señaban una doctrina muy opuesta á la de los após
cristianismo con las ideas de la filosofia pagana; casi toles, que no estaban subyugados por su autoridad,
contemporáneo de Basílides y Saturnino cayó en los y que sin embargo convenian en los principales hechos
mismos errores, y añadió otros nuevos. publicados por los apóstoles, en las virtudes, mila
Para esplicar la demasiado célebre cuestion del origros, padecimientos y resurreccion de Jesucristo: se
¿ del mal, supuso como Platon, que el mundo no ha gun S. Epifanio los carpocracianos y los corintios
ia sido criado por un Dios supremo infinilamente po admitian ¿? Evangelio de S. Mateo, Haer 28 y 30.
deroso y bueno; sino por genios inferiores poco sumisos Cómo podrian sostener los incrédulos en el dia que
á Dios. Por esto se concibe que todos estos razonadores los hechos publicados por los apóstoles y la historia
no admitian la creacion tomada en todo el rigor de la que los refiere no fueron creidos sino por el ueblo,
palabra; ¿cómo unos seres inferiores á Dios podian es los ignorantes é imbéciles á quienes los apóstoles ha
tar dotados del poder creador? Para dar razon de las bian subyugado?
imperfecciones, de las miserias y de las debilidades Mas las impudicicias y desórdenes á que se entre
del hombre, supuso Carpocrates la preexistencia de gaban estos sectarios causaban al cristianismo el ma
las almas: decia que habían pecado en una vida an yor perjuicio. Los paganos eran incapaces de discer
terior; que en castigo de su crimen habian sido con nir los verdaderos cristianos de los falsos; atribuian
denadas á ser encerradas en los cuerpos y sujetas al á todos en general la perversidad de costumbres de
imperio de los genios creadores del mundo; que para algunos hereges, y los prestigios de estos últimos de
agradar á estos genios, era preciso satisfacer todos los sacreditaban los verdaderos milagros obrados por los
deseos de la carne y todos los movimientos de las pa apóstoles y sus discípulos. Los Padres de la Iglesia
siones. Concluia que ninguna accion es buena ó mala, nos hacen notar este inconveniente, S. Epifanio Hae
virtuosa ó criminal en sí no solamente segun lo opi res. 3%, etc. Celso se prevalia de esto contra los cris
nion de los hombres. Esta era tambien la moral ¿ tianos; habla de una secta de harpocracianos que
filósofos de la secta cirenáica. Orígenes dice que no conoce. Contra Cels; l. 5, nú
Toda alma, añadian los carpocracianos, que no ha mero 62. Es probable que queria hablar de los car
cumplido en esta vida todas las obras de la carne, pocracianos.
está condenada despues de la muerte á pasará otros Mosheim, Hist. eccl., siglo II, S. 9, habla de los
cuerpos, hasta que haya satisfecho toda deuda. La carpocracianos de la misma suerte que de los demas
concupistencia es el enemigo de que habla el evan hereges del segundo siglo: no puede persuadirse que
gelio, Mat. c. 5, y 25, con el cual es preciso que Carpócrates hubiese enseñado todos los absurdos é
nos pongamos de acuerdo mientras que caminemos infamias que le atribuyen los Padres de la Iglesia;
con él, por temor de que no nos haga pagar hasta el sospecha, ó que lo entendieron mal, ó que suprimie
último óbolo. En su consecuencia estos hereges se en ron los correctivos con que suavizaba tal vez lo que
tregaban á la impudicicia, establecian la comunidad su doctrina presentaba primera vista repugnante,
de las mugeres, vituperaban los ayunos y las mortifi etc. Por este método no hay insensato, impostor, ni
caciones, no buscaban mas que el placer y tenian unas blasfemador ¿ no pueda escusarse. Es enojoso ver
costumbres muy licenciosas. ¿ esta caridad de Mosheim respecto de los herejes
Tenian de Jesucristo una idea muy rara. Segun egenera en malignidad para con los Padres de la
ellos, el alma de Jesucristo antes de haber encarna Iglesia: se diria ¿ no trata de recusar á los pri
do, habia sido mas fiel á Dios que las demas. Por meros sino para dar una idea mas baja de los segun
esta razon Dios la habia suministrado mas conoci dos; esta afectacion es demasiado notable para no
miento que á las de los demas hombres, mas fuerza ser apercibida por todos los lectores imparciales; por
para vencer á los génios enemigos de la humanidad y consiguiente no puede hacer impresion sobre ningun
para volver al cielo á pesar de estos. Dios, decian, ánimo sensato. Le Clerc ha sido mas circunspecto.
concede la misma gracia á los que aman á Jesucristo,
y conocen como él la dignidad de su alma. Cartas. Se habla en la historia eclesiástica de
Los carpocracianos consideraban pues áJesucristo diferentes especies de cartas, como cartas formadas
como un puro hombre, aunque mas perfecto que los ó canónicas; cartas de comunion, de paz, de reco
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mendacion; cartas de orden, cartas apostólicas etc. otras austeridades, escepto que siempre comen en co
En la FonMADAs hablaremos de las primeras munidad v en un mismo refectorio.
y en el artículo INDULGENCIA haremos mencion de las Antes d Concilio de Trento profesaban á los doce
cartas que los mártires y confesores daban á los que años, é iban á recreo con los cartujos, sus directores, y
eran reducidos á la penitencia canónica, y por las los legos. El número de las religiosas estaba fijado en
cuales pedian que se abreviara el tiempo de esta pe cada casa, no tomaban dote, y no recibian mas que
nitencia. las que podia mantener el convento. En el dia reci
Añadiremos que se llamaban cartas formadas ó ca ben dote, no salen de la clausura sino para ir á re
nónicas, los testimonios que se daban á los obispos, creo, y no profesan hasta los diez y ocho años.
sacerdotes y clérigos cuando tenian que viajar, al pa Como los cartujos han conservado los antiguos ri
so que se denominaban cartas de comunion, de pazó tos de la Iglesia, las cartujas tambien tienen todavía
recomendacion las que se daban á los seglares cuando la costumbre de consagrar las vírgenes, segun los an
se encontraban en el mismo caso. El concilio de Lao tiguos pontificales; esta ceremonia se hace á los vein
dicea del año 366, el Milovitano en 102 y el de Meaux te y cinco años, y conservan el velo blanco hasta esta
en 85 mandan á los sacerdotes y clérigos que se época. Esta consagracion es hecha por el obispo que
ven obligados á viajar que pidan á su obispo cartas las da la estola, el manípulo y el velo negro, pronun
canónicas; y prohiben admitir á la comunion y á las ciando las mismas palabras que en la ordenacion de
funciones eclesiásticas á los que no han tomado esta los diáconos y subdiáconos. Llevan estos ornamentos
¿ Un concilio de Cartago del año 397, pro el dia de su consagracion, en su año de jubileo, que
ibe tambien á los obispos el pasar la mar sin haber es el cincuenta de religion, y se las entierra con
recibido del primado ó metropolitano unas cartas se ellos. -

mejantes. Las prioras y religiosas prometen obediencia al ca

Esta precaucion era necesaria principalmente en pítulo general de la Orden, enviando todos los años
los primeros siglos, ya durante las persecuciones una nueva promesa desumision, las prioras estan tam
cuando era peligroso fiarse de estraños que hubieran bien obligadas á obedecer al padre vicario que dirige
podido pasar porcristianos sin serlo, ya para no comu su casa, las simples religiosas y las legas están suje
nicar con herejes, y ya tambien para no ser engañado las á la priora y al vicario. Este vive ordinariamente
por hombres que se hubiesen atribuido falsamente los con cuatro ó cinco religiosos tanto sacerdotes como
privilegios del estado eclesiástico. En el dia aun está legos.
en uso en las diversas diócesis no dejar ejercer nin Los monasterios de cartujas tienen sus recintos y
guna funcion á ningun sacerdote estraño si no está límites fijados como los de los religiosos: por los últi
provisto de una licencia ó de un testimonio de su obis mos estatutos, se prohibe á las prioras y á los vica
po, á menos que no sea suficientemente conocido por rios el enviar á los religiosos fuera de su recinto sin
otra parte. - - permiso del capítulo general. Por los estatutos reco
Se llama earta de orden (entre nosotros titulos de pilados en 1368 por el general D. Guillermo Rainal
orden) el testimonio de un obispo por el cual consta di, en 1581 por D. Bernardo Goraste, y confirma
que tal clérigo ha recibido tal orden, sea menor ó sa dos por el Papa Inocencio XI, se prohibe tambien
¿ siéndole permitido egercer sus funciones. Se erigir nuevos monasterios de cartujas, ó el incorpo
laman cartas apostólicas los rescriptos del soberano rar otros nuevos á la Orden sin duda porque su ma
pontífice, ya para la condenacion de algun error, ya yor número seria una carga para los religiosos.
para la colación de un beneficio, ya para conceder una El hábito de las cartujas es un ropaje de paño blan
dispensa, ó ya en in para absolver de una censura. co, una correa, un escapulario atado á los lados C0n
V. BREve. fajas y un manto blanco como el de los cartujos: su
velo y toca son semejantes á los de las demas religio
Cartesiamis mano. V. DESCARTE3. sas. No hablan nunca á las seglares, ni aun á sus
parientes mas prócsimos sino con el velo bajo acom
Cartujas. Religiosas cuyo instituto es muy poco pañadas de la priora ó de alguna otra religiosa. No
conocido. Lo que se sabe es que el primer monaste obstante se ha moderado para ellas la rigidez del si
rio de cartujas parece que fue fundado viviendo el lencio y la soledad de las celdas.
B. Guigues, vicario general de la Orden. En el dia no
hay mas que cinco monasterios: Prémol á dos leguas Cartujos. Orden religiosa instituida por San
de Grenoble, fundado el año 123 por Beatriz de Mont Bruno, canónigo de Rheims el año 1085, y notable
ferrat, esposa del Delfin Andrés: Melun en el Jaussig por la austeridad de su regla. Obliga á los religiosos á
ny en Saboya diócesis de Ginebra, fundado en 1288: una soledad perpétna, á la abstinencia de la carne,
Salette á orillas del Ródano, en la Baronía de la Tours aun en el caso de enfermedad peligrosa ó mortal, y
fundado por el Delfin Hamberto I, Ana su esposa y al silencio absoluto, escepto en ciertas épocas deter
Juan su hijo, el año 1299; Maria de Viennois su hija minadas.
se hizo religiosa en él, y fue priora; Gosne en la dio Un filósofo célebre que no ha podido menos de elo
cesis de Arras, fundado por el obispo Thierry Heris giarles, añade sin embargo dos restricciones malig
son, en 1308, Bruges fundado en 13. nas: «Es, dice, la única Orden antigua que no ha
Las cartujas se conforman en todo lo que es posi— » tenido necesidad de una reforma; es poco numerosa
ble á la regla de los religiosos de esta Orden, tanto » y demasiado rica en verdad para hombres separados
respecto del oticio divino, de los ritos y cere moniasde » del siglo; pero á pesar de estas riquezas, consagra
la Iglesia como de las abstinencias, ayunos, silencio y » dos sin descanso al ayuno, al silencio, á la oracion,
 CAR 347 CAR
ȇ la soledad, viven tranquilos sobre la tierra, en me vincias; el fervor de sus religiosos es igual en los di
» dio de tantas agitaciones, cuyo ruido apenas llega versos estados de Europa. Se dice que hay 70 de ellas
» hasta ellos, no conociendo los soberanos sino por las en Francia: el autor del Diccionario geográfico es de
»oraciones en que estan inscriptos sus nombres. Dicho parecer que es preciso suprimirlas, sin duda, por te
»sos ellos si virtudes tan puras y perseverantes pu— mor de que el ejemplo de las virtudes puras y perse
» dieran ser útiles al mundo.» verantes de estos religiosos se haga contagioso, y
Hasta ahora nadie ha acusado á los cartujos de ha— pruebe demasiado claramente lo absurdo de la moral
cer un mal uso de sus riquezas, ni de rehusar ausilio filosófica.
á los desgrac ados. Jamás creeremos que el ejemplo
de las virtudes puras y perseverantes sea inutil al Casiano. Abad del monasterio de S. Victor de
mundo, en ninguna parte es mas necesario que en Marsella, muerto poco despues del año 433, fne cé
la capital del reino. - lebre á principios del siglo V por sus virtudes y es
Hé aquí pues una Orden religiosa que hace sete— critos. Ha dejado un libro de la Encarnacion contra
cientos años persevera en el fervor de su primera ins Nesterio, las Instituciones de la vida monástica en
titucion: prueba bastante convincente de la sabidu doce libros, uno de las conferencias espirituales. En
ría y santidad de la regla que observa. Con poca ra el libro trece, Casiano, pareció enseñar el error de los
zon, pues, han repetido cien veces los críticos de la vi semipelagianos; para refutarle escribió S. Próspero su
da monástica que la pretendida perfeccion á que as obra titulada contra Collatorem. Mas en la época de
piran los religiosos es incompatible con la debilidad Casiano la Iglesia no habia aun pronunciado sobre es
humana, que sus fundadores fueron entusiastas im te punto: no se decidió hasta el concilio de Orange en
prudentes, que la vida del claustro es un suicidio len 529: por consiguiente el error de Casiano no ha impe
lo y voluntario, etc. Mr. de Rancé, abad de la Trapa, dido que su memoria se tenga en veneracion. Los pro—
trató de probar que los cartujos se habian relajado testantes le tratan de ignorante y supersticioso, por—
de la grande austeridad que les estaba prescrita por que introdujo en las Galias la manera de vivir de los
las constituciones de Guigues I, su quinto general, pe solitarios y de los monges de la Tebaida; mas la pre
ro D. Inocencio Masson, elegido general en 1675, en vencion de los protestantes contra la vida monástica
una respuesta á Mr. de Rancé, ha hecho ver que las les hace malos jueces del mérito de los que la practi
pretendidas constituciones ó estatutos de Guigues, no can. Véase MoNGE.
eran mas que costumbres que él habia compilado, y
que no fueron leyes sino mucho tiempo despues. Caso de c oncemela. Cuestion moral relati
Efectivamente, S. Bruno no dejo ninguna regla es— va á los deberes del hombre y del cristiano, que con
crita á sus religiosos. Guigues, elegido el año 110, siste en saber si tal accion es permitida ó prohibida,
puso por escrito las costumbres y usos de la Orden; ó á que puede estar obligado un hombre en tales cir
y Basílio, octavo general elegido el año 1151 , fue cunstancias. A los teólogos casuistas pertenece esta
el que redactó sus constituciones, tales como fueron decision; á ellos toca juzgar segun sus luces de la ra
aprobados por la Santa Sede. Los cartujos han dado zon, las leyes de la sociedad, los cánones de la Igle
á la Iglesia muchos santos prelados, v un gran nú sia y las máximas del Evangelio; cuatro grandes
mero de hombres ilustres por su doctrina y piedad. autoridades que nunca pueden estar en contradiccion,
Su general no toma otro título mas que el de prior de pero de las cuales la última lleva la preferencia por—
la gran cartuja. D. Petreius, cartujo, hizo imprimir que es mucho mas facil ver si el Evangelio ha pres
la biblioteca de los escritores de su Orden, en Colonia crito ó prohibido tal accion, que el juzgar si es con
en 1609, en 8.º forme ó contraria á la recta razon y al bien de la so
Brucker, ha querido probar contra D. Mabillon, ciedad. -

¿ S., Bruno fundador de los cartujos, habia sido Para saber si una decision de los casuistas es ver—
iscípulo del famoso Berenger herege condenado por dadera ó falsa, es preciso examinar bien los términos
haber negado la presencia real de Jesucristo en la en que se ha propuesto la cuestion; porque omitida
eucaristia. Qué importa el hecho siendo cierto como una circunstancia ó cambiada en la esposicion del caso,
es que S. Bruno refutó espresamente á Berenger en debe muchas veces cambiar absolutamente la deci
su comentario sobre la primera epístola de S. Pablo sion; lo mismo sucede con las consultas de los aboga
á los corinthios, c. 11, y que antes de morir hizo la dos y de los canonistas.
profesion de fé mas terminante del dogma católico con Seria enteramente inutil examinar cuál de los dos
respecto á la presencia real? Vida de los Padres y de perjudica mas á la sociedad, el que ataca los dogmas
los mártires, 6 de octubre. He aqui dos hechos que y las pruebas de la religion, ó el que por principios
Brucker no debió pasar en silencio; pero nada dijo demasiado relajados trabaja en corromper la mo
de ellos á fin de dar lugar á sospechar que S. Bruno ral: cualquiera de estos dos abusos es pernicioso; los
¿? probablemente como Berenger respecto de dos deben reprimirse.
Los críticos mas severos de los casuistas convienen
a eucaristia. Hist. philosoph., t. 3, p. 662.
Todo el mundo sabe que la historia de la conver ya en que entre la multitud de los que han sido con
sion de S. Bruno, motivada por la pretendida reve vencidos de relajacion, en los principios, apenas exis
lacion de un canónigo muerto que dijo estaba conde te uno á quien se pueda acusar de relajacion en su
nado, es una fábula cuya falsedad han probado mu conducta; que todos parece no haber sido indulgen
chos críticos, y que no fue publicada sino ciento y tes sino para los demas; que sus costumbres perso
cincuenta años despues de la muerte de S. Bruno. Su nales no tienen nada de comun con sus máximas. Por
Orden posee 172 casas, divididas en diez y seis pro el contrario, es cierto que los casuistas mas rígidos si
 CAS (38) CAS
an exactamente en su conducta la severidad de sus la segunda, cuando los ha cometido algun religioso 6
¿ Los primeros pueden escusarse por la rec religiosa, ó alguna muger, sea casada, doncella ó
titud de sus intenciones: raciocinan mal, pero sin el viuda, á los pobres y ancianos, y á todos aquellos que
menor interés; temen hacer odiosa la moral para las no pueden irá Roma. Cuando el papa concede esta
almas pusilánimes; no tienen razon, es ¿ pero licencia de absolver de los casos que le estan reser
no veian las consecuencias funestas de sus decisiones, vados, da tambien la de absolver de las censuras en
¿ tenian ellos mismos designio de conformarse á que han incurrido, porque estos estan reservados al
ella.S. papa por causa de las censuras anejas á ellos. Segun
Puede decirse otro tanto de los incrédulos que ata el concilio de Trento, cualquiera sacerdote que no es
can la religion con sus escritos? tienen en ello una té escomulgado públicamente, puede absolver de cua
intencion laudable? No han recibido de ninguna lesquiera, casos reservados y censuras á las personas
autoridad la comision de inspirar dudás á los creyen constituidas en el artículo de la muerte, lo que los
tes ni alterar su tranquilidad. El tono imperioso de teólogos estienden con razon á todo peligro probable
sus escritos, la temeridad de sus aserciones, la ma de muerte. -

lignidad de sus acusaciones, la infidelidad en sus ci De los casos reservados á los obispos. Respecto á la
tas, no son los medios mas honrosos para persua reservacion de algunos casos á los obispos, es diferen
dir y granjearse la confianza de los demas. Los, ca te segun la costumbre de la diócesis, y provechosa
suistas han escrito en una lengua que no es la vulgar: porque inspira mas horror á los delitos grandes en el
estaban moralmente convencidos de que sus obras mismo hecho de ser mas dificil su absolucion. Segun
no serian consultadas sino por teólogos , que sus el ritual de Paris, los casos reservados al arzobispo son
ruesos volúmenes permanecerian encerrados en las los siguientes: primero, la accion de maltratar nota
ibliotecas. Por el contrario, nuestros incrédulos mo blemente á un religioso ó clérigo ordenado in sacris;
dernos escriben para el público y las mugeres espar segundo, el incendio voluntario: tercero, el robo con
cen folletos y hacen los mayores esfuerzos para que el fractura en lugar ¿ cuarto, el homicidio vo
veneno penetre hasta en los últimos estados de la so luntario: quinto, el duelo ó desafio: sesto, la accion
ciedad. de atentar á la vida del marido ó de la muger: sépti
Muchos de ellos convienen en que la corrupcion de mo, el de procurar el aborto: octavo, el de herir ó
costumbres es una consecuencia infalible de la irre maltratará sus padres: noveno, el sacrilegio, enve—
ligion, como han demostrado Bomdalone y otros, con nenamiento y agorería: décimo, la profanacion de la
venciéndonos de ello por desgracia la esperiencia. Es Eucaristía ó de los santos Oleos: undécimo, la efusion
tambien cierto que las decisiones de los casuistas rela violenta de sangre en la iglesia duodécimo, la for
jados del último siglo influyeron mucho en la depra nicacion en la misma: décimo tercero, la accion de
vacion de costumbres? No tenemos mas pruebas de abusar de una religiosa: décimo cuarto, el crimen
este hecho que los clamores de partido. Los que mas del confesor con su penitente: décimo quinto, el rap
se han esforzado en proclamarlo, tal vez contribuye to: décimo sesto, el incesto en segundo grado: déci
ron mas que nadie, por lo absurdo de sus sistemas, á mo séptimo, la sodomía y otros pecados semejantes;
que naciese la irreligion. décimo octavo, el hurto sacrílego: décimo nono, el
CASO DE CONCIENCIA. V. JANsENismo. falso testimonio, el falsificar moneda y documentos
eclesiásticos, vigésimo, la simonía y confidencia ocul
Casos reservados. (Derecho canónico). ta: vigésimo primero, el sup'antar títulos ó personas
En la disciplina eclesiástica se da este nombre á cier para el exámen y promocion de los órdenes sagrados.
tos pecados atroces, cuya absolucion se reservan el El obispo, su vicario general, su penitenciario y aque
papa, los obispos, y otros superiores eclesiásticos á sí los que tienen su licencia especial, pueden ¿.
mismos ó á sus vicarios generales. En la práctica ac de los casos que les estan reservados; pero en el artí
tual de la Iglesia católica hay unos casos reservados culo de la muerte no hay distincion de confesores, ni
al papa y otros reservados á los obispos, reservacion de casos; cualquiera sacerdote puede ab
Los casos reservados al papa, segun el ritual de Pa solver al que se halla en este estado, con tal que haya
ris, son: primero, el incentio de las iglesias, y sitios dado ¿? de penitencia ó arrepentimiento. Cuando
profanos, si el incendiario es denunciado públicamen el cabildo de la catedral ejerce la jurisdicion, sede
ie: segundo, la simonía real en las órdenes y los be vacante, tiene facultades para dar ¿ á cual
neficios y la confidencia pública: tercero, el asesi quiera; de absolver de los casos que estaban reservados
nato ó mutilacion de una persona constituida en los al obispo. Puede tambien dárselas á los confesores, y
órdenes sagrados: cuarto, herir ó maltratar á un limitarlas por algun tiempo, segun los lugares, casos
obispo ú otro prelado: quinto, suministrar armas á y personas, y revocar las que el obispo haya dado
los infieles: sesto, falsificar las bulas ó cartas del papa: por sí mismo, ó por su vicario general. En los con
séptimo, invadir ó saquear las tierras de la Iglesia ventos hay casos reservados por los capítulos, de los
romana: octavo violar el entredicho de la Santa Se— cuales solo pueden absolver los superiores. -

de. Antes era preciso irá Roma para obtener la ab
solucion de los casos reservados al papa; pero en el
dia les da facultad particular de absolverlos á los
obispos, y aun á los presbíteros alguna vez. El conci
lio de Trento tambien autorizó á los obispos para que
absolviesen de todos los casos reservados al papa en
dos ocasiones: la primera, cuando no son públicos; y
Los canonistas han suscitado la cuestion de si el
que ha cometido en una diócesis un delito ó pecado,
cuya absolucion está reservada al obispo, y se halla,
sin llevar ese designio, en otra diócesis donde aquel
delito no es reservado, puede recibir la absolucion de
un confesor que no tenga facultad especial para los
casos reservados. Los canonistas mas hábiles han crei
 CAS 39) CAS
do que en este caso cualquiera confesor puede absol te los peligros, y prohiba severamente todo lo que
ver al penitente, dando dos razones para ello: la una pueda perjudicará la pureza de costumbres. Tal era
porque los confesores no estan obligados á saber los precisamente la época en que se predicó el Evangelio.
casos que hay reservados en cada diócesis de los pe Debe distinguirse la castidad de la continencia; un
nitentes que se presenten; y la otra porque el acusa hombre que vive en la continencia ó que no es casa
do debe ser juzgado segun las reglas qué se observan do puede no ser casto, asi como hay una castidad
en el parage donde se le ha formado el proceso, se propia del estado del matrimonio. Pero el que no haya
gun los principios del derecho romano, adoptados en contraido un feliz hábito de esta virtud, no la guar—
el derecho canónico. (Estracto del Diccionario de Ju dará en ningun estado; ordinariamente cuesta poco
risprudencia). cuando desde luego se acostumbra á respetarla y á
huir de todo lo que pueda ofenderla.
Castidad. Virtud moral y cristiana que consiste No es cierto que los elogios hechos por los Padres
en reprimir y moderar los deseos desarreglados de la de la Iglesia y por el Evangelio á la castidad inspi
carne. Es muy peligroso herir esta virtud cuando se ren desprecio ó aversion hácia el matrimonio; por el
habla en un tono demasiado filosófico; es una falta contrario, ninguno proveyó mas eficazmente á la san
que se puede echar en cara á los protestantes y á los tidad de este estado que Jesucristo dándonos á cono—
incrédulos. En la palabra CELIBATo citaremos las pa cer el precio de la castidad. No es la pureza del ma—
abras por cuyo medio Jesucristo y los apóstoles han trimonio la que aleja de él á los hombres, sino su cor
tratado de inspirar á los cristianos la mas alta estima rupcion. No acriminaremos, pues, á los Padres de la
cion por la castidad. El nombre mismo de virtud, si— Iglesia por haber alabado á las vírgenes que prefirie—
nónimo del de fuerza, nos dáá conocer que es lauda ron la muerte á la pérdida de su pudor; conocian me
ble reprimir las inclinaciones que se enseñorean de— jor que nuestros filósofos hasta donde llegaba el ri
masiado de nuestra naturaleza; ahora bien, si hay una gor de las máximas sobre este asunto tan importante.
cuyo imperio sea temible es el grito de los deleites Algunos de estos últimos dijeron que la castidad
sensuales; por poco que nos dejemos dominar de esta consiste en no gozar de los placeres sensuales, sino en
inclinacion, bien pronto nos hace sus esclavos, tanto que lo permita la ley natural. No adoptamos
A pesar de la corrupcion del paganismo, los filóso— esla idea. La ley natural ha sido muy nmal conocida
fos antiguos comprendieron el mérito de la castidad. por los filósofos; muchos aprobaron ó escusaron su for
Ciceron, despues de reconocer que el culto de la Divi— nicacion y demas desórdenes; S. Pablo fue el prime—
nidad ecsige mucha inocencia y piedad, una inviolable ro que prescribió á las personas casadas y á las que
pureza del corazon y de la boca, de Nat. Deor, l. 2, no lo son reglas sabias y sólidas. I Cor, c. 6 y 7.
c. 28, refiere un pasage de Sécrates, en el que este fi Es, pues, el Evangelio el que nos ha dado á conocer
lósofo compara la vida de las almas castas á la de los sobre este punto la verdarera ley natural. Al ense
dioses Tuscul. q. lib. 1.º n. 11%. Casta placent supe— ñarnos que el hombre es hecho á imagen de Dios, que
ris, decian los mismos poetas. En Roma, en las so su mismo cuerpo es consagrado á Dios por el bau
lemnidades mas grandes iban coros de jovenes de am tismo, que es templo del Espíritu Santo y destinado
bos sexos para cantar las alabanzas de los dioses; á una resurreccion gloriosa, nos ha dado del hombre
creian que la castidad propia de esta edad era un mé otra idea diferente de la que tenian los filósofos: es
rito á los ojos de la Divinidad. Pero es preciso conve— el que mejor nos ha hecho, conocer la necesidad de
nir en que las costumbres públicas no estaban de domar los apetitos desarreglados del cuerpo, y de so
acuerdo en esta persuasion. meterlos al espíritu. Mas cuando se cree, como la ma
«Bienaventurados los limpios de corazon porque yor parte de los incrédulos modernos, que el hombre
ellos veran á Dios. Mat. c. 5, y. 8. Con estas cortas no es mas que un animal, se saca la consecuencia co
alabras ilustró Jesucristo al mundo y le purificó de mo ellos que está en su derecho siguiendo sin escrú
os desórdenes del paganismo. Convenimos en que so pulo todas las inclinacioues de la animalidad; y que
bre este punto lleva el Evangelio su severidad hasta cuando resiste á ellas, etc. resiste á la naturaleza. Es
donde puede ir: que á los ojos de un cristiano, un pen muy facil calcular los efectos que debe producir so
samiento reflexionado, un deseo, una mirada, la bre las costumbres de las naciones esta doctrina de
menor complacencia sensual bastan para ofender la testable.
castidad. Es admirable que una moral tan austera Por antipatia contra el celibato y contra el voto de
haya podido encontrar, no solo oyentes dóciles en los continencia, los protestantes han hablado de la casti
siglos mas corrompidos, sino sectarios que la han dad con cierto desprecio; han puesto en ridículo los
puesto en práctica bajo los climas mas á propósito para elogios que hicieron de ella los Padres de la Iglesia.
oponerse á ello. ¿Cuáles han sido las consecuencias de esta conducta?
Sin embargo, nada prueba mejor la sabiduria de Que son menos escrupulosos acerca del adulterio, y
nuestro divino Maestro. Cuando las naciones han lle Lutero mismo se ha espresado sobre este punto de una
gado al último grado de civilizacion, la libertad y fa manera escandalosa; han permitido el divorcio por
miliaridad que reinan entre ambos sexos podrian causa de adulterio dando con este motivo una falsa
acarrear las mas fatales consecuencias si no ecsis interpretacion del Evangelio. En segundo lugar, las
tieran principios de moral capaces de producir los costumbres de los pueblos del norte, que eran en otro
mismos efectos que la clausura, la soledad y la vida tiempo mas puras que las de las naciones del medio
retirada de las mugeres entre los orientales. Por lo dia, son al presente por lo menos tan licenciosas;
tanto es necesario que la religion sugiera las precau esto es lo que atestiguan los viageros. Hé aquí cómo
ciones, escite la vigilancia, anime los esfuerzos, apar la relajacion sobre un artículo de moral jamás deja de
TOMO , 50
 CAS 350 CAS
conducir á otras, y de producir los mas funestos efec En vano se trata de usar espresiones indecentes
los. V. CELIBATo, CoNTINENCIA, virgINIDAD. para envilecerlos; se dice que un eclesiástico vende
Castigos de Dios. V. JusTICIA DE Dios. las cosas santas; que un militar vende su vida; un
magistrado la justicia: un médico la salud; un pro
Casual. Derechos casuales. Se llaman asi los ho fesor las ciencias, elc. La malignidad de los críti
norarios ó retribuciones concedidas á los euras, vica cos no tiene el poder de hacer injusto y despreciable
rios, ó servidores de las parroquias, por las funciones lo que está conforme en la esencia á la equidad na—
de su ministerio, tales como los bautismos, casamien tural y á la razon.
los, en tierros, etc. Cuando Jesucristo ordenó á sus discípulos que die
Muchas veces se ha tratado de hacer estos derechos sen gratuitamente lo que habian recibido por pura
odiosos porque se ignoraba su origen. En los prime— gracia, tuvo cuidado de añadir que todo obrero es
ros siglos de la lglesia sus ministros subsistian de las digno de que se le mantenga. Mat. c. 10 y 8 y 10.
oblaciones voluntarias de los fieles; asi es que propia Si repelimos mas de una vez estos principios, es
mente hablando, todo era casual. Las diferentes re porque han sido desconocidos por escritores que se
voluciones causadas por las persecuciones, por las he creen muy instruidos, sin serlo bastante, y censura
regías y por las irrupciones de los bárbaros, dieron ron la disciplina actual de la Iglesia sin razones su
á conocer que la subsistencia de los eclesiásticos se— ficientes.
ria menos precaria, asignádoles fondos. Esto no cos . En 1757 apareció una disertacion sobre el hono
laba nada en tiempos en que habia una gran cantidad rario de las inisas, en la que el autor condena toda
de tierras incultas por la falta de propietarios. Tal es retribucion manual dada á un sacerdote para lle
el origen de la institucion de los beneficios. nar una funcion santa, los derechos curiales y casua
En la época de Carlo Magno se concedió ó se hizo les, las fundaciones para misas ó para otras oraciones
dará los pastores el diezmo por el mismo motivo. En á perpetuidad, etc. Considera todo esto como una es -
la decadencia de la raza Carlovingiana la Iglesia fue pecie de simonía y como una profanacion.
despojada por los señores: se apoderaron de los fondos Esta doctrina es enteramente falsa. No puede ne
y de los diezmos, y el clero quedo poco menos quepe garse que á veces se han introducido abusos é inde
reciendo. Los pueblos se vieron obligados á recurrirá cencias en este uso; el autor de la disertacion los ha
los religiosos para recibir los ausilios espirituales, ó dado á conocer muy bien; los reprueba y deplora
sostener sacerdotes con retribuciones domésticas; de con razon; mas era preciso imitar la sabiduria de
esta manera se estableció lo casual. los concilios, de los soberanos pontifices y de los obis
Si los párrocos fueran dueños de elegir, preferirian pos, que al condenar los abusos y proscribirlos de
sin dudar una subsistencia asegurada sobre fondos y jaron subsistir un uso legítimo en sí mismo. -

diezmos, á la triste necesidad de recibir honorarios Todavia hay mas; es preciso hacer una distin
por sus funciones. En muchas diócesis hay parro cion entre una paga, un honorario y una limosna. El
quias que se encuentran suficientemente dotadas con pago ó precio de una cosa se reputa como la compen
los fondos y el diezmo, lo casual fue suprimido. Por socion de su valor: asi se compra un género, una
el contrario, los eclesiásticos superiores y los tribuna mercancia y un servicio mercenario, y se paga el
les seculares se vieron en la necesidad de arreglar precio á proporcion de su valor. El honorario es una
un casual mayor en las parroquias que no tenian fon especie de sueldo ó subsistencia concedida á una per
dos ni diezmos, y establecer las porciones congruas. sona que está ocupada por el público, ó por cualquie
Muchos jurisconsultos y aun autores eclesiásticos ra en particular, sea el que fuere por otra parte el
han dicho que los sacerdotes recibian estos honora— valor de su ocupacion. Se dá sueldo ú honorario á un
rios á título de limosna; nos parece que han padeci militar, á un magistrado, á un juriseonsulto, á un
do un engaño. Una limosna no se dá inas que por ca médico, á un profesor de ciencias, á un hombre con
ridad, no obliga á nada al que la recibe; el honorario un cargo cualquiera, sin pretender por esto pagar ó
es debido por justicia, é impone al ministro de los recompensar el valor de sus servicios ó de sus talen
altares una nueva obligacion de llenar esactamente tos y establecer una proporcion entre uno y otro.
sus funciones. Es de derecho natural el proveer á la Que sean mas o menos hábiles, mas ó menos celosos ó
subsistencia de todo hombre que está ocupado por nos aplicados, el honorario es el mismo. La limosna se
otros, cualquiera que sea el género de su ocupacion. da á un pobre por caridad; el honorario es debido á
De la misma manera que es justo pagar su sueldo al titulo de justicia. El que rehusa dar limosna á un po
militar, conceder los honorarios á un magistrado, á bre peca sin duda alguna, pero no está obligado á
un médico y á un abogado, lo es tambien el proveer la restitucion; el que rehusa los honorarios á un
á la subsistencia de un eclesiástico ocupado en su san hombre que ha llenado sus deberes se le condenará
to ministerio; el honorario que le es asignado es tan á la restitucion. - -

limosna como el de los hombres útiles de que aca Que el honorario sea fijo ó accidental, pagado por
bamos de hablar. el público ó por los particulares, concedido á titulo
Lo que reciben, lanto unos como otros no es el de sueldo anual ó de pension, que sea casual, uni
precio de su trabajo; los diversos servicios que pres do á cada funcion que se llene ó á cada servicio que
tan no se pueden estimar á precio de oro, y no son se haga, es igual; no cambia de naturaleza; el títu
pagados á proporcion de la importancia de sus fun lo de justicia es siempre el mismo.
ciones: la diversidad de talentos y del mérito perso— Por lo tanto no es cierto que un sacerdote ó cléri
nal de cada particular hace que no se pueda estable go no pueda recibir nada legítimamente de los fieles
cer un honorario igual para todos. si no es á titulo de limosna. Desde el momento que
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era, que celebra, que llena una funcion santa por una nistros de la Iglesia han heredado de los apóstoles
persona ó por muchas y está ocupado por ellas, tiene mismos el espíritu mercenario y ambicioso de que
derecho á una subsistencia, á un sueldo, á un hono— siempre estuvieron animados. W. BENEFIcio, SIMoNíA.
rario. Jesucristo lo decidió de esla suerte hablando de
sus apóstoles: el obrero es digno de su jornal. Mat. Casusta. Teólogo que ha hecho un estudio par
c. 10, y. 10. S. Pablo habla de la misma manera, ticular de la moral, de las leyes divinas y humanas,
1. Cor. c. 9, y. 7, etc. «Quién lleva las armas á sus de los deberes del hombre y del cristianismo á fin de
espensas?.... Si nosotros os distribuimos las cosas es— ponerse en estado de resolver las dudas que los fieles
pirituales, es una gran recompensa el recibir de vos puedan tener acerca de su conducta, de hacerles co
otros alguna retribucion tempora? Los que sirven nocer la gravedad de sus faltas y prescribirles lo que
al altar, tienen su parte del altar; así, el Señor ha deben hacer para repararlas, Una vez que la moral
arreglado que los que anuncian el Evangelio vivan forma parte esencial de la teologia, permílasenos ha
del Evangelio». cer algunas reflexiones sobre este asunto.
Que estas cosas espirituales sean instrucciones, sa— La funcion del casuista es seguramente una de las
crificios, sacramentos, oraciones, la asistencia de los mas difíciles por la estension de conocimientos que
enfermos, elc. el derecho á un honorario es el mismo. supone, una de las mas importantes por la naturaleza
Es sabido que en su origen los ministros de los al de su objeto, una de las mas peligrosas á causa de las
tares recibieron ofrendas en género ó en dinero; mas consecuencia que puede producir una falsa deci—
adelante, para asegurar mas su subsistencia y ha— sion. En este género el rigorismo ecsagerado no pro—
cerla menos precaria, se instituyeron para ellos be duce efectos menos funestos que la relajacion escesiva.
neficios eclesiásticos, semejantes á los beneficios mi Un casuista ejerce las funciones de juez; no le es mas
litares. Los juriconsultos que han sostenido que las permitido ecsagerar que disminuir las obligaciones
rentas de los beneficios son una pura limosna, debie— que Dios nos impone. Si llegara á ecsigir del que le
ran haber dicho lo mismo de los antiguos militares. consulta una restitucion que no es debida, no pecaria
Cuando el clero fue arruinado por los grandes en los menos gravemente que si la dispensara sin razon.
tiempos de anarquia, fue necesario volver a las re Cuando los casuistas no han sido esactos en sus jui
tribuciones manuales. Esto era una desgracia, es cios óse han dejado llevar del torrente de los que les
verdad; pero es preciso no atribuirlo ni á la Iglesia, precedieron, han obrado mal sin duda, pero no se
niá sus ministros que fueron las primeras víctimas. les puede acusar de haber pecado voluntariamente.
En general, desconfiemos de los reformadores de A dónde se encontrará un hombre tan insensato que
masiado atrevidos ; jamas hubo tanto número como quiera arriesgar su propia salvacion sin ningun inte
en el dia. Que digan, si les place, qué seria mejor; rés ó haciéndose responsable de los pecados de otro?
que segun la antigua disciplina ningun sacerdote En nuestra época los filósofos han levantado un
fuese ordenado sin poseer un beneficio, y sin estar grito general para sostener que la ley natural es evi
agregado á una iglesia con alguna funcion, ó si se dente por sí misma; que la razon nos descubre infali
ria mejor que los fieles tuviesen mas confianza en la blemente todos nuestros deberes. No obstante se ha
comunion de los santos y en las oracioues generales escrito un gran número de volúmenes para saber si la
de la Iglesia, y menos ambicion y vanidad para obte mentira oficiosa está permitida ó prohibida por la ley
ner de los sacerdotes oraciones particulares para ellos natural, si el interés del dinero percibido en virtud
solos. Seria mejor, efectivamente, que los mismos sa del simple préstamo es legítimo ó usurario. A dónde
cerdoles prefirieran la cualidad de ministros de la Igle está, pues, esa pretendida evidencia y la brújula que
sia ó de la sociedad comun de los fieles, á la de ser— debe seguir un casuista para decidir estas cuestiones?
vidor y doméstico de un gran señor. Seria tambien No obstante, no debe vituperarse la esactitud y aun
de desear que los grandes fuesen menos orgullosos y la severidad de los obispos para reprimir cuando es
menos esclavos de su molicie, que asistiesen á los necesario la temeridad de los casuistas; uno de sus
egercicios públicos del culto divino, mas bien que principales deberes es velar por la conservacion del
ecsigir para ellos un culto doméstico y ministros que depósito de la fé y de la moral.
esten á sus órdenes. Mas aun cuando no se pueda ob— Mas ¿para que aprobar de la misma suerte el calor
tener lo mejor, es preciso no condenar lo que no es con que Pascal y otros persiguieron á mediados del
malo de un modo absoluto y bajo todos aspectos. Si siglo último la moral relajada de algunos cosuistas
la Iglesia emprendiera la reforma de los abusos que oscuros? Debieran preveer que los principios de estos -
se la echan en cara, todos los poderes seculares, to autores, recopilados en un cuerpo y espuestos en len
dos los particulares interesados en conservarlos se gua vulgar, enardecerian las pasiones siempre dis
opondrian á ello con todas sus fuerzas. puestas á apoyarse aun en la autoridad mas fragil. El
Está permitido el manifestar estos abusos, desear escándalo que la delacion de estas máximas ocasionó
su correccion y proponer los medios de evitarlos; pe en la Iglesia fue tal vez un mal mayor que el que
ro es preciso no argumentar sobre principios falsos, hubieran producido esos volúmenes empolvados y
ni atribuir el mal á los que no son sus autores. Este arrinconados en las tinieblas de algunas bibliotecas
es el medio de desacreditar una obra que por otra monàsticas.
parte podria ser util, de faltar al fin á que se aspira, Efectivamente: ¿quién conocia á Villalobos, Con
y de dar armas á los hereges y á los incrédulos. No nink, Llamas, Achosier, Dealkoser, Squilani, Bi
emos visto á estos últimos censurar á S. Pablo por las zozeri, Iribarne, Grassahi, Pitigianis, Strevesdorf y
mácsimas justas y sábias que hemos citado mas arri otros muchos? Eran peligrosos sus principios para
ba? No se han avergonzado de escribir que los mi los ignorantes y las mugeres que no entienden la
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lengua en que escribieron estos autores, para los que En el dia se llaman en ltalia catacumbas una gran
han olvidado el latin y que no tienen tiempo de leer, porcion de sepulcros subterráneos, que estan á los
o para los teólogos ilustrados y decididos acerca de alrededores de Roma, con especialidad á tres millas
estas materias? No es preciso ser gran casuista para de esta ciudad, cerca de la via Apia. Se cree que es
juzgar cuál de los dos es mas culpable; si el que deja tos eran los sepulcros de los mártires; se va á visi
escapar una proposicion absurda que pasaria sin con tarlos por devocion sacando de ellos reliquias para
secuencias, ó el que la nola y la da importancia. enviarlas á los diversos paises católicos despues que
En vano los escritores de otro género, los predi el papa las reconoce bajo el nombre de algun santo.
cadores de la irreligion tratarian de escudarse con Estas catacumbas tienen generalmente dos ó tres
estas reflexiones para aminorar sus propios eslravios pies de ancho y ocho ó diez de alto, en forma de ga
y para hacer odiosos á los teólogos que los observan lerias que se comunican unas con otras, y se estien
y refutan. Los errores, propios que publican tienen den muchas veces hasta una legua de Roma. No tie—
otra consecuencia que los de los casuistas; no pueden nen fábrica ni bóveda, la tierra se sostiene por sí sola.
escusarse los primeros con ninguna razon plausible: Las dos paredes de estas calles que son como los mu
las obras de los incrédulos han hecho mas mal en diez ros, servian de arriba abajo para poner los cuerpos
años, que todos los casuístas del universo en un siglo. de los muertos. Se les colocaba á lo largo, formando
V. CASO DE CONCIENCIA. tres ó cuatro filas los unos sobre los otros y paralela
mente á la calle; se las cerraba con unas tejas muy
Casulla. V. VESTIDURAS SAGRADAs ó SACERDo— anchas y gruesas, á veces con trozos de marmol tra
TALES. bajados de tal suerte que con dificultad se imitan en el
dia. El nombre del muerto se encuentra á veces,
Catabaptistas. A veces se ha empleado este aunque es muy raro, sobre las tejas; otras aparece
término para designar en general todos los hereges tambien una rama de palma, símbolo del martirio,
que han negado la necesidad del bautismo, princi— con esta cifra piutada ó grabada XP, que se inter
palmente para los niños. Está formado de kaia, que prela pro Christo.
en composicion significa algunas veces contra, y de Para hacer sospechosas las reliquias sacadas de las
Bapto larar, bautizar; significa opuesto al bautismo, catacumbas, muchos protestantes dicen que estas
enemigo del bautismo. - cuevas estaban destinadas para sepultura de los pa
Los que han sostenido este error parten poco mas ganos; que aunque los romanos tenian por costum
6 menos del mismo principio; no creian el pecado bre el quemar sus muertos, no obstante enterraban
original, y no atribuián al bautismo mas virtud que los de los esclavos, para evitar gastos. Los romanos
la de escitar la fé. Segun ellos, sin la fé actual del hechos cristianos, dicen, viendo la veneracion en que
bautizado el sacramento no puede producir ningun se tenian las reliquias, y queriendo tenerlas á su
efecto; los niños que son incapaces de creer, le reci— disposicion, entraron en las catacumbas, pusieron al
ben inutilmente. Esta es la opinion de los soci— lado de los sepulcros las cifras ó inscripciones que les
nianos. Otros han establecido como mácsima general plugo, y las cerraron para volverá abrirlas despues,
que la gracia no puede ser producida en un alma por cuando encontraron una ocasion favorable. Esta su—
un signo esterior que no afecta mas que al cuerpo; percheria fue olvidada hasta que la casualidad hizo
que Dios no ha podido hacer que dependa la salva que se descubrieran las catacumbas.
cion de semejante medio. Esta doctrina, que ataca Antes de acusar á los romanos cristianos de un
la eficacia de todos los sacramentos, es una conse crimen tan grave, era preciso tener pruebas: no solo
cuencia natural de la anterior. - no las tienen los protestantes, sino que sus conjeturas
Aunque Pelagio negó el pecado original, no ponia son muy absurdas. ¿Todos los habitantes de una ciu
en duda la necesidad, ó por lo menos la utilidad del dad pudieron convenir á la vez en cometer una su
bautismo, para dar á un niño la gracia de adopcion; percheria y una impiedad, para procurar á sus
en un niño, decia, la gracia encuentra una adopcion descendientes la satisfaccion de distribuir falsas reli
que hacer, pero el agua no halla nada que lavar; liquias, sin tener el menor interés en ello, y sin que
Habet gratia quod adopter, non habet unda quod hubiese alguno que fuera bastante probo para recla
abluat. Solo la nocion de bautismo que lleva en sí la mar contra semejante engaño? No se cometen críme
de purificacion, basta para refutar á Pelagio; jamas nes por solo el placer de cometerlos.
esplicó con claridad este herege en lo que hacia con Por el contrario, está probado: 1.º que la costum—
sistir la gracia de adopcion. bre de los romanos paganos no era el de enterrar en
las catacumbas á los criminales esclavos y al pueblo
Catacumba, del griego kATA, en, y RUMBAs, bajo, sino el arrojarlos á unos grandes fosos llamados
hueco, designa una cueva subterránea abierta pra puticuli, y de quemar alli un gran número de ellos
dar sepultura á los muertos. Las catacumbas se lla á la vez; al paso que quemaban en particular los
maban tambien crypta, cavernas, y coemeteria, dor cuerpos de las personas notables, y encerraban sus
mitorios. cenizas en urnas. Los romanos que dejaban morir de
Segun algunos autores, este nombre no se daba en hambre en una isla del Tiber á sus esclavos viejos ó
otro tiempo en Roma mas que á los sepulcros de San enfermos, se habian de tomar el trabajo de conceder
Pedro y San Pablo, ó á una capilla de San Sebastian, les una sepultura honrosa en las catacumbas?
en la cual, segun el antiguo calendario romano, fue 2." Los cristianos evitaban con cuidado enterrar
colocado el cuerpo de San Pedro, el año 258, bajo el á sus muertos en el mismo lugar que los paganos; ya
consulado de Tusco y Basso. lo vemos en la historia que el martir Luciano hize
 CAT 353 CAT
del descubrimiento de las reliquias de S. Esteban. octubre, las pruebas detalladas de los hechos que he
San Cipriano acrimina á Marcial, obispo español, por mos alegado.
haber hecho enterrar á los niños en las tumbas profa Las catacumbas de Nápoles pueden ser un objeto de
nas y mezclarlos con los estraños. Estamos, pues, curiosidad para los viajeros, pero no suministran nin
muy ciertos de que no se enterró ningun pagano en un guna otra reflexion respecto de las reliquias, fuera
cementerio destinado para sepultura de los cristianos. de las que ya hemos mencionado al hablar de las de
3.° Es incontestable que las catacumbas sirvie— Roma.
ron para reunirse los cristianos en tiempos de perse
cución, y por la misma razon ¿ sepultura de los Catafrigas ó catafrigilanos. V, MoNTA
mártires que se veian obligados á enterrar con el ma NISTAS.
yor secreto. El uso constante ha sido celebrar los san
los misterios sobre las reliquias de los mártires, y los Cataratas. V. DILUvio.
fieles deseaban por devocion ser enterrados al lado de
aquellos preciosos depósitos. La historia eclesiástica y Cataristas ó purificadores. Secla de ma
las actas de los mártires hacen mencion de las prohi niqueos sobre la cual arrojaban las demás las inmun
biciones hechas á los cristianos por sus perseguidores dicias ó impiedades que se cometian en la pretendi
de celebrar sus asambleas en los cementerios. No las da congregacion de la Eucaristia. S. Agustin, Haer.,
habian querido tener entre los sepulcros de los pa— 6; S. Leon, Epist.8.
ganos.
4." Prudencio, S. Paulino y otros atestiguan que Cataros. Del griego KATzARos, puro, nombre
las catacumbas de Roma encerraban los cuerpos de que se han atribuido muchas sectas de hereges, prin
muchos millares de mártires; este hecho se encuentra cipalmente los apolácticos ó renunciantes, que eran
tambien atestiguado por las inscripciones, una de las una rama de los encratitas. Algunos montanistas se
cuales hace mencion de quinientos cincuenta márti engalanaron despues con el nombre de cataros, para
res enterrados juntos, y otra de ciento cincuenta. San probar que no tenian parte en el crimen de los que
Gerónimo dice, que en su juventud tenia costumbre negaban la fe en los tormentos, sino que por el con
de visitar las catacumbas los domingos, in Ezech,, ca trario rehnsaban admitirlos á la penitencia; severi
pítulo 40. Estos santos lugares nunca fueron olvidados dad , injusta y desmedida. Para justificarla negaban
ni perdidos de vista, y en el siglo IV se sabia que en ue la Iglesia tuviese el poder de perdonar los peca—
cerraban mártires y no paganos. ¿ llevaban vestidos blancos para manifestar, de
5.” Un gran número de estos sepulcros son cono cian, por su traje, la pureza de su conciencia. Nova
cidos por las inscripciones y por otros símbolos, por el ciano, preocupado con el mismo error que los monta
monograma de Jesucristo XP, por la figura del buen nistas, denominó de la misma suerte á su secta, y al
pastor, por las palmas, por las ampollitas ó cubile gunos antiguos no la nombran de otra manera.
tes de sangre colocados con sus cuerpos, etc. Por ironia se llaman cataros diferentes sectas de
6." No se puede determinar el tiempo en que se hereges que metieron mucho ruido en el siglo XII, los
supone que las catacumbas fueron maliciosamente cer albigenses, los valdenses, los putarinos, los salteado
radas por los romanos para dar lugar mas adelante á res y otros descendientes de los henriquianos, de
un error. Durante las persecuciones, los cristianos se Charsilio, de Tendemo, etc. Fueron condenados en
servian de ellas para sus reuniones y para las sepul el concilio III de Letran, celebrado en 1179, en el
turas; cuando volvió la paz á la Iglesia eran visitadas pontificado de Alejandro III. Los puritanos de Ingla
por devocion. Si se cerraron cuando los bárbaros sa— terra se decoraron con el mismo título.
quearon á Roma, no fue por malicia, sino para evitar Comunmente bajo una máscara de virtud y de re
las profanaciones. Cuando se restableció la tranquili forma es como los heresiarcas han seducido á los sim
dad, no se habia olvidado lo que los autores eclesiásti ples y se han hecho partidarios; pero una afectacion
cos dijeron de ellas en el siglo IV. de regularidad que tiene por base el espíritu de rebe
Las congeluras de los protestantes de Burnet, de lion y pertinacia, no es generalmente de larga dura
Misson, de Spanheim, de Basnage, etc., son, pues, fal cion; con frecuencia no es mas que un velo para en
sas bajo todos conceptos. cubrir verdaderos desórdenes; los novadores que han
De estas observaciones puede deducirse con toda llegado á ser fuertes, no son los mismos que eran cuan
la certeza posible que los huesos sacados de las cata do se encontraban débiles. Los muchos ejemplos de
cumbas son reliquias, ó de los mártires cuando estosemejante hipocresia, renovados desde el origen de la
se comprueba, ó de los primeros fieles. Aunque estos Iglesia, hubieran debido¿ á los pueblos;
no hayan sido todos santos, conociendo las costum— pero re están dispuestos á dejarse coger en la
misma red.
bres de la Iglesia primitiva y la disposicion en que -

estaban los primeros cristianos de morir por su fe, no

puede negarse que sus reliquias son dignas de vene Cateelsnao. No solo es la instruccion que se dá
racion. á los niños ó á los adultos para enseñarles la creencia
Si algunos lectores católicos se han dejado seducir y la moral del cristianismo, sino tambien el libro que
por las sospechas y congeturas malignas de los pro contiene esta instruccion. Como los obispos fueron es
testantes sobre este asunto es porque no han exami tablecidos por Jesucristo para enseñar á los fieles, á
nado la cuestion tan cerca como lo han hecho los ellos toca el dar á sus diocesanos el libro que llama
críticos y los anticuarios de Roma. Se pueden ver en mos catecismo. El que se hizo por orden del concilio
las Vidas de los Padres y de los Mártires, etc., 1% de de Trento, ha servido de modelo para formar la ma
 CAT 35%) CAT

yor parte de los que se usan en el dia en la Iglesia dientes, á los segundos arrodillados, genuflectentes;
católica. La uniformidad de la doctrina enseñada en dicen que estos últimos asistian á las oraciones y se
todos estos libros elementales es una prueba irrecusa arrodillaban con los fieles, al paso que los primeros
ble de la unidad de la fe que reina en toda esta Iglesia. no permanecian en la iglesia sino durante el evange
Si á veces los obispos han tratado de emitir en ellos lio y el sermon. -

opiniones que no pertenecen á la fe católica, general El cardenal Bona distingue cuatro grados: los oyen
mente ha sido mal acogida esta temeridad; han encon les, los arrodillados, los competentes y los elegidos,
trado por parte de su clero v de sus ovejas nna resis audientes, genuflectentes, competentes, electi. Mr. Fleu
tencia que no esperaban. Prueba que no son dueños ry no cuenta nas que dos, los oyentes y los compe
de cambiar á su placer la fe de su rebaño. lentes; otros los reducen á tres, lo que prueba que
En la mayor parte de los catecismos hechos por los esla disciplina no era uniforme. -

protestantes han tenido cuidado de introducir en ellos Se recibian los catecúmenos por la imposicion de las
acusaciones contra la Iglesia romana, á fin de inspi manos y haciéndoles la señal de la cruz; en muchas
rar á los niños desde la cuna ciertas prevenciones y iglesias se añadian los exorcismos, las ceremonias de
0dio contra el catolicismo. Mas moderados que ellos, soplar sobre el rostro, aplicar saliva a las orejas y á
nosotros no enseñamos á los niños á detestar á los que las narices, de untar el pecho y los hombros y poner
estan en el error; quisieramos dejarlos ignorar que sal en la boca. Estas ceremonias, cuyo sentido se es
existen herejes en el mundo. lica en nuestros catecismos, se observan todavia en
De cuantos libros hay, acaso el mas dificil de hacer a administracion del bautismo, aun para el de los ni
es un buen catecismo, porque es un compendio de teo ños; otras veces precedian algunos dias, cuando no se
logia; cuanto mas instruido es un hombre, tanto mas bautizaba sino en las fiestas solemnes. Segun Tertulia
conoce su dificultad. no, se daba tambien leche y miel á los catecúmenos
antes de bautizarlos, símbolo de su renacimiento en
Cate cuannemado, Catecúnmemo. Un cate — Jesucristo y de su infancia en la fe: en este sentido
cúmeno es una persona que desea recibir el bautismo San Agustin ha llamado sacramento ó misterio á esta
que se hace instruir con este designio. En la Iglesia ceremonia; tambien se llamaba el escrutinio. Véase
primitiva
I'0II)0I) dS.
esto se hacia con muchas precauciones y ce esta palabra.
Se hizo observar el catecumenado en las iglesias
«Al que juzgaban capaz de ser cristiano, dice Mr. de Oriente y Occidente, en lanto que hubo infieles que
¿ hacíaale catecúmeno por medio de la imposi convertir, por consiguiente en el Occidente hasta el
cion de las manos. El obispo ó el sacerdote le hacia siglo VIII. Despues no se ha observado esta discipli
en la frente la señal de la cruz, rogando á Dios que na lan exactamente respecto de los adultos que pe
aprovechara las instrucciones que iba á recibir y que dian el hautismo, porque no habia razon para temer
se hiciera digno de llegar al santo bautismo. Asistia los peligros que en los siglos anteriores,
á los sermones públicos, á los que eran admitidos Mas no es inulil el conservar su memeria; de
hasta los mismos infieles. El tiempo del catecume ello resulta que se ha tenido siempre gran cuidado
nado era comunmente de dos años, pero se prolon. de instruir á los que querian abrazar el cristianis
gaba ó abreviaba segun los progresos y las disposi mo, pero se temia, que despues de estar bautizados,
ciones del catecúmeno. No se miraba solo si aprendia deshonrasen con una vida pagana la santidadde nues
la doctrina, sino además si corregia sus costumbres, tra religion. Es una prueba mas para refutar á los in
y se le dejaba en este estado, hasta que estuviera en crédulos antiguos ó modernos que se atrevieron á de
teramente convertido». Costumbres de los Cristia— cir que los primeros fieles eran un monlon de igno
nos, tít. 2. rantes ú hombres deshonrados por sus malas cos
Los catecúmenos se distinguian de los fieles, no so tumbres.
lo por el nombre que llevaban, sino por el lugar que El catecumenado era, pues, una prueba y una pre
ocupaban en la Iglesia. Estaban con los penitentes caucion que se habia juzgado necesaria para no admi
bajo el pórtico ó en la galeria anterior de la basílica. tir en la sociedad cristiana sugetos mal instruidos,
No se les permitia admitirá la celebracion de los san viciosos, pero firmes y capaces de abandonar su fé
tos inisterios, pero inmediatamente despues del evan y renegar de ella al menor peligro; y aun tal vez
gelio y la instruccion del diacóno les decia en alta voz: el calumniar á la lglesia al par que sus persegui
Ite, catechumeni, misa est. retiraos, catecúmenos, se dores.
os manda salir. Esta parte de la misa se llamaba La duracion de esta prueba no fue siempre la mis
tambien la misa , de los catecúmenos. Segun parece, ma en lodos los tiempos ni en todos los lugares: el
por un canon del concilio de Orange no se les permi concilio de Elvira en España, celebrado hácia el
tia hacer oracion con los fieles; se les daba pan bendi año 300, decidió que durase dos años; Justiniano
to, llamado por esta razon el pan de los catecúmenos, mandó lo mismo para los judios que quisieran con
como un símbolo de comunion, á la cual podrian ser vertirse. El ¿? de Agdes del año 506, no les ec
admitidos en adelante. sigia mas que ocho meses de instruccion. Las cons
Habia muchos órdenes ó grados de catecúmenos; tituciones apostólicas mas antiguas que este concilio,
pero el número y distincion de eslas órdenes no han edian tres años de preparacion antes de recibir el
sido siempre los mismos en todas partes. Los autores ¿ l. 8, c. 32. Algunos creyeron que bas
griegos distinguen dos clases, una de catecúmenos im taba el tiempo de la cuaresma. En circunstancias
Perfectos y otra de perfectos ó capaces de ser admiti apremiantes se abreviaba mas este término. Hablan
dos al bautismo. Llaman á los primeros oyentes, au do Sócrates de la conversion de los Burguiñones, dice
 CAT 355 CAT
que un obispo de las Galias se contentó con instruir— puede deducir una prueba cierta de la preeminencia
los por espacio de siete dias. Si un catecúmeno se de los obispos respecto de los simples sacerdotes y
hallaba repentinamente en peligro de muerte se le de la distincion reconocida entre estas dos órdenes des
bautizaba en el momento. En general se dejaba á la de el tiempo de los apóstoles.
prudencia de los obispos el prolongar ó abreviar el CATEDRA DE S. PEDRO. Nombre de dos fiestas
tiempo de la instruccion y de las pruebas, segun la que se celebran en la Iglesia católica, una el 18 de
necesidad y las disposiciones que veian en los cate - enero por la cátedra de S. Pedro en Roma, y la otra
címenos. Bingham, Orig. Eccl, t. , l. 10, c. 5, S 5. el 22 de febrero por la cátedra de este apostol en An—
Morin, de Poenit; Laubepine, Observaciones sobre los tioquía. Estas dos fiestas son muy antiguas; la pri
antiguos ritos de la Iglesia; Fleury, costumbres de los mera está notada en un ejemplar del martirologio atri
cristianos é Hist. eccl, Ant. Sacram. 2." part., t. 3, buido á S. Gerónimo, y un concilio de Tours hace
c. 2, etc. mencion de ella el año 567. Ya se habla de la cátedra
de S. Pedro en general en un calendario formado en
Cátedra de Moisés. Este término significa en tiempo del papa Liberio, hácia el año 35% y tambien
el Evangelio la funcion de enseñar que egercian en es el objeto del centésimo sermon de S. Leon. Véase
tre los judios los doctores de la ley, porque su ense Vidas de los Padres y de los Martires, 18 de enero y
ñanza consistia en leer y esplicar al pueblo la ley de 22 de febrero.
Moisés. «Los escribas y fariseos, dice el Salvador, En la primitiva Iglesia, asi como los cristianos ce-.
están sentados en la cátedra de Moisés: observad lebraban el aniversario de su bautismo, los obispos
pues, y haced todo lo que os digan; pero no imiteis solemnizaban el dia aniversario de su ordenacion ó
su conducta, porque ellos no hacen lo que dicen. de su exaltacion. Tal fué el origen de las dos fiestas de
Cargan á los hombres con fardos pesados é insopor que hablamos. La Iglesia está persuadida de que la
tables, y no quieren ni aun moverlos con la punta sucesion de S. Pedro no estaba unida á la primera si
de los dedos». Mat. c. 23, y.2. lla que habia ocupado, sino á aquella en que habia
Esta leccion de Jesucristo presenta alguna dificul— muerto, y dejó un obispo para reemplazarle. A pe—
tad, y los rabinos han abusado de ella. Queria obli— sar de la oscuridad con que han tratado los protestantes
al pueblo á cargar con fardos insoportables que de esparcir sobre el viaje, morada y martirio de San
e imponian los escribas y fariseos? Muchas veces el Pedro en Roma, es un punto de historia que está en
Salvador les habia vituperado el corromper la ley de el dia completamente probado.
Dios con falsas tradiciones; habia demostrado la fal Que desde los primeros siglos la silla de Roma ha
edad, de muchas de sus decisiones; cómo podia sido considerada como el centro de la Iglesia católica,
mandar al pueblo practicar y observar su doctrina? es un hecho atestiguado por S. Ireneo desde el se
Nos parece que debe distinguirse lo que enseñaban gundo. «Es preciso, dice, que toda Iglesia ó toda la
los escribas y fariseos en público, cuando esplicaban Iglesia, es decir los fieles que están en todas partes,
la ley de Moisés en la sinagoga, de lo que decidian convengan con esta Iglesia de Roma), á causa de su
muchas veces en particular; que su doctrina públi— preeminencia bien manifiesta : Iglesia en la cual los
ca era comunmente ortodoxa, que era preciso se fieles de todo el mundo han conservado siempre (ú
guirla, al paso que sus lecciones particulares eran observado), la tradicion que viene de los apóstoles.»
con frecuencia falsas, y era necesario separarse de Adv. haºr. l. 3, c. 3. Este pasage ha incomodado siem
ellas, así como de sus ejemplos. Esta es por lo gene pre mucho á los protestantes, han hecho los mayo
ral la costumbre de los falsos doctores, tales como res esfuerzos por variar su sentido; ya veremos en
pinta Jesucristo á los escribas y fariseos. otra parte si lo han conseguido. Véase SANTA SEde.
Los rabinos deducen mal de este pasage, que se
gun Jesucristo mismo, la moral de los judios era muy Cátedra episcopal. (Derecho canónico).
buena, y que le era imposible enseñar otra mejor. En los primeros años del cristianismo, el obispo que pre
Véase la conferencia del judio Orobio con Limborh, p. sidia el presbiterio, es decir, la asamblea de los pres
192 y sig. bíteros, tenia la cátedra, que era un asiento parti
CATEDRA DE TEOLOGÍA. Es la profesion y fun cular distinguido de los demas porque estaba mas al—
cion de enseñar esta ciencia. Obtener una cátedra en to, y se llamaba cátedra pontifical.
una Universidad es ser admitido y estar autorizado Tomó esta costumbre la Iglesia de la Sinagoga, en
ra dar lecciones de teología. Ocupar nna cátedra de la cual el gran sacerdote gefe del San—hedrin, á
engua hebrea ó de teología positiva es esplicar á los ejemplo de Moisés, estaba sentado en una cátedra.
jóvenes teólogos el testo hebreo delaSagrada Escritura, Los rabinos en el dia solo tienen un banco en un sitio
o darles lecciones sobre la historia eclesiástica, etc. mas elevado que los otros, y por delante una espe
CATEDRA EPISCOPAL. Especie de trono sobre el cie de bufete, en el cual ponen los libros santos para
cual están sentados los obispos cuando ofician de esplicarlos, y las luces cuando son necesarias.
Jesucristo da metafóricamente el nombre de Cáte—
pontifical. De aqui toma origen el nombre de silla
episcopal, y la iglesia catedral en la que el obispo dra de Moisés á la funcion de enseñar, y á la autori
preside el oficio divino. La manera más antigua de dad de los doctores de la ley. Nos servimos de la mis
colocar esta cátedra era el ponerla en el centro del ma metáfora, y entendemos por cátedra episcopal la
coro mas distante del altar, colocando á uno y otro autoridad de un obispo y la predicacion de las verda
lado una fila de sillas para los sacerdotes. Asi se cons des evangélicas; y segun este mismo modo de hablar
truyeron las basílicas más antiguas, y el modelo se se dice la cátedra de la pestilencia, como si los impíos
tuviesen una tribuna desde ta cual predicasen sus er
sacó del libro del Apocalipsis, c. y 5. De esto se
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rores, asi como los ministros de Dios tienen las suyas tieron la imprudencia de administrar el bautismo á los
para predicar la verdad. judios ni á los paganos sin haberles enseñado de
Habia tambien entre los judios cátedras de honor antemano los dogmas que era preciso creer y la mo
que estaban ocupadas por los fariseos en las sinago ral que habia que practicar.
gas: nosotros tenemos tambiensillas de honor en nues Asi lo mandó Jesucristo cuando dice á sus apóstoles
tras iglesias. que enseñen á todas las naciones y las bauticen des
En la Iglesia Católica se celebran dos fiestas con el pues, Mat. c. 28, y. 19. El mismo dió el ejemplo, los
nombre de cátedra de San Pedro en Antioquia y en apóstoles le siguieron, los Padres de la Iglesia, los
Roma, en memoria del tiempo que el príncipe de los obispos, los párrocos cumplieron con este deber en
apóstoles gobernó aquellas dos iglesias. - todos los siglos con mas ó menos esactitud y écsito.
Tambian se entiende por cátedra de Roma el cen— En todos los tiempos los concilios exhortaron á los ecle
tro de la unidad católica, porque los obispos de aque siásticos á llenarlo, haciendo de ello un deber rigo
lla ciudad, al sucederá San Pedro en la silla episcopal, roso; el Concilio de Trento renovó estas leyes, sess. 2
le han sucedido al mismo tiempo en la primacía que de Reform. c. 7. Mas no se prueba por ningun monu
Jesucristo le concedió sobre los apóstoles; y en este mento antiguo que la instruccion de los neófitos con
sentido hablaba San Ireneo en el sigloll de la era cris sistiese en hacerles leer la Sagrada Escritura, como
tiana, cuando decia que todas las iglesias particula creen Mosheim y otros protestantes segun la preocu
res debian sujetarse á la de Roma en las cosas perte pacion de su secta. Por el contrario losincrédulos acu
necientes á la fé. San á los primeros cristianos el haber ocultado sus li
bros con el mayor cuidado; otra preocupacion que no
Cuatedral. Iglesia episcºpal de una diócesis; este está mejor fundada.
nombre trae su origen de la voz cathedra, silla de un Es, pues, una injusticia por parte de los incrédulos,
obispo, Desde el origen de la Iglesia, durante la ce— el tratar de persuadir que el cristianismo se estableció
lebracion de los santos misterios, el obispo presidia al en las tinieblas por medio de seducciones y artificios
presbiterio ó á la asamblea de los sacerdotes, estaba que los primeros fieles creyeron sin pruebas ni moti
sentado sobre una especie de trono ó de silla mas vos, recibiendo el bautismo sin saber á lo que se obli
elevada que las demás : asi es como S., Juan repre gaban. El rigor de las pruebas á que se les sometia no
senta en el Apocalipsis una reunion cristiana, c. , era seguramente una red tendida para seducirlos.
y. 2. De aqui viene el uso de designar la dignidad de Ninguna religion ha impuesto á sus ministros una
un obispo por el nombre de cátedra ó de silla, ca obligacion tan estrecha de instruir á los ignorantes,
thedra; de celebrar tambien las fiestas de la cátedra y por cierto que no la descuidaron en ningun tiempo.
de S. Pedro en Antioquía y Roma, de llamar Iglesia Sus antiguos enemigos, Celso y otros, les han echa
catedral la Iglesia ó reunion principal en que preside do en cara la pasion del proselitismo; los del dia tam
el obispo. -
bien les acriminan de la misma suerte, jamás llega
Mas este nombre empleado para designar un edifi rá el dia de que se avergüencen. V. EscUELAs cais
cio ó un templo, en el que celebra el obispo comun TiANAS.
mente no es muy antiguo, no ha estado en uso mas
que en Occidente en este sentido, y despues del si Catequista. Eclesiástico encargado de enseñar
lo X. Aunque los cristianos hayan tenido la libertad á los catecúmenos los primeros elementos de la reli
e construir algunos sitios para reuniones desde fines ion, y prepararlos para recibir el bautismo y los
del siglo III, bajo el reinado de Diocleciano, parece emas sacramentos.
que solo se empezaron á construir grandes iglesias en Como es muy raro en el dia bautizar á los adultos,
tiempo de Constantino, cuando se permitió el libre la funcion de catequista se limita á instruir á los
egercicio del cristianismo, y en todo el Oriente estas niños en las verdades de la religion, y prepararlos de
iglesias en que celebraba el obispo, se llamaban la esta suerte para recibir los sacramentos de la confir
grande Iglesia, la Iglesia episcopal, la Iglesia de la macion, de la penitencia y hacer su primera comunion.
ciudad, o simplemente la Iglesia: se llamaban basíli Si esta funcion se confia generalmente á jóvenes
cas las iglesias particulares erigidas en honor de los eclesiásticos, no es porque sea muy facil de llenar; ec
mártires y de otros santos. - sige una claridad de entendimiento, d una prudencia
Muchos autores españoles que escribieron sobre y paciencia singulares, pero los medios de instruc
la antigüedad de sus iglesias catedrales, dicen que las cion se han multiplicado entre nosotros, pudiéndose
hay que datan del tiempo de los apóstoles, pero esto sustituir el uno con el otro.
no está fundado sobre ninguna prueba positiva.
XX Católicos nuevos. (Derecho eclesiástico).
* Catequesis. Del griego KATzEJEsis instruc Son unas monjas que en el último siglo se erigieron en
cion, catecismo. Tiene la misma etimologia y el mismo comunidad con este título, ó el de la propagacion de la
sentido. Es la instruccion que se daba á los que que fé, para instruir en las verdades de la religion á las
rian abrazar el cristianismo y recibir el bautismo; el personas de su secso que han nacido en la heregía,
catequista era el encargado de esta funcion. así como hacen los misioneros. Las que entran para
En los primeros siglos no estaba en uso el poner educarse en estas comunidades son mantenidas de
por escrito los dogmas y prácticas del cristianismo; era todo hasta que han abjurado su error y eslan bien
de temer que estos escritos cayesen en manos de los firmes en la fé. Tambien pueden ser recibidas en el
paganos, que abusaran de ellos y los pusieran en ridí número de las hermanas. En unas comunidades,
culo, porque no los comprenderian. Pero jamás come cuando entran las novicias, hacen los votos simples de
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pobreza, castidad y obediencia, y ofrecen emplearse c. 11, y . 1., en S. Pablo que la fé de la iglesia de Roma
particularmente en la instruccion de las recien con— es célebre en todo el mundo, Rom. c. 1, y.8.
vertidas; en otras comunidades solo hacen voto de «Otra distincion esencial que hay que hacer es en
rmanecer, ó sea de estabilidad; y en otras solo tre la universalidad sucesiva y la universalidad actual.
acen un contrato de compañía. Cada una de ellas Creemos que la Iglesia de Jesucristo debe tener suce
tiene sus reglamentos ó estatutos particulares, segun sivamente la catolicidad física y total; es decir, que en
ha querido dárselos el obispo del territorio donde es— lodo el cúrso de los siglos no ¿ un pais habitado
tan establecidas. La comunidad de París se cono sobre la tierra en que no haya sido anunciada la ver
ce con el nombre de nuevas conversas: la de Sedan dadera fé, y en que Dios no haya tenido sus adora
y otras, bajo el de la propagacion de la fé (Estracto dores en verdad y conforme al culto que prescribio.
del Diccionario de Jurisprudencia). Asi es como entendemos el orácnlo de Jesucristo, que
yo repetiré sin cesar sobre la predicacion de su Evan—
Catolicidad. Universalidad, estension á todos gelio en todo el universo. Mas entre nosotros no es un
los lugares, á todos los tiempos, á todas las personas. punto de doctrina cierto que la Iglesia de Jesucristo
La catolicidad de una doctrina consiste en que ha si debe ser física y totalmente universal, de suerte que
do la misma desde los apóstoles hasta nosotros en no haya sobre la tierra mas que católicos. No vemos
todas las sociedades cristianas que se han fundado que haya sido prometido por Jesucristo este género de
en todos los siglos, en el cuerpo de los pastores como universalidad. Esto puede ser el objeto de nuestros de
en el de los fieles. La catolicidad de la Iglesia es la seos y aun de nuestras esperanzas, pero no de nuestra
profesion que hace de tener esta uniformidad gene— é. Por lo demas la catolicidad sucesivamente total,
ral y constante como un signo infalible de verdad. que nosotros consideramos como una cualidad de la
La catolicidad de un fiel es su sumision á este méto verdadera Iglesia, no puede ser presentada como una
do de enseñanza. de sus notas, pues que no es actualmente visible. Asi
“M. de la Luzerne, Disertacion sobre las iglesias es que no hablaré de ella en este momento; no pre
católica y protestante, se espresa de esta manera. sentaré como nota distintiva de la Iglesia mas que su
« La catolicidad de la Iglesia es su universalidad. universalidad actual tal como la vemos, como se ha
Muchos Santos Padres, tratando de la catolicidad dis visto en todas las edades; es decir, lo vuelvo á repe
tinguen una triple universalidad: universalidad de tir, su universalidad moral.
tiempo, en cuanto que la Iglesia siempre ha subsis «Considerando la catolicidad como un carácter con
tido y subsistirá hasta el fin de los siglos; universa cedido á la verdadera Iglesia para distinguirla de las
lidad de doctrina, en cuanto la Iglesia enseña todas demas comuniones cristianas, dividimos tambien su
las verdades que Jesucristo trajo á la tierra; univer catolicidad en absoluta y relativa; es decir, la difu—
salidad de lugares, pues que la Iglesia se ha esten— sion, la estension de la Iglesia de Jesucristo conside
dido por todo el mundo... De esta tercera especie rada en sí misma, y su estension, su difusion, compa
de universalidad es de la que aqui se trata. rada á la de las sectas separadas de ella. Nosotros
« Hay que hacer muchas distinciones sobre la uni cremos que aunque existan paises en que no haya
versalidadó catolicidad de la lg'esia. Desde luego dis penetrado la verdaderafé, y otros en que se haya des—
tinguiremos la universalidad física y la universalidad terrado completamente, no obstante ella, es y debe
moral. La primera es la que comprende todos los pai ser en todo tiempo mas esparcida que cada una de las
ses de la tierra sin escepcion; la segunda la que se iglesias falsas, y que esta difusion mayor es uno de
estiende por la mayor parte de las regiones cono los caracteres en que se la debe reconocer y se la dis
cidas. tingue de las demas.
«De la segunda trataremos en este lugar. El esta «Segun estas observaciones, reduzco á dos puntos
blecimiento de nuestra Iglesia en la mayor parte de principales la nocion de la catolicidad considerada
las regiones conocidas es lo que forma segun nosotros como caracter de la verdadera lglesia. Consiste: 1.º,
su catolicidad, y es lo que prueba su origen divino. en que la Iglesia de Jesucristo esté estendida en la ac
No creemos de ninguna manera, y en este punto se tualidad por la mayor parte de las regiones conoci—
guimos la doctrina de S. Agustin, que sea necesario das; 2.”, que constantemente esté mas esparcida que
para la catolicidad de la Iglesia que la totalidad de los cada una de las comuniones qoe la combaten. Tales
habitantes de los paises en que se ha introducido, la nuestra doctrina.....
obedezcan. Basta que haya en estas regiones un nú «Las pruebas de la catolicidad, tal como nosotros
mero notable de católicos para que hagan parte de la entendemos, se sacan de la Escritura, que los pro
la catolicidad. S. Agust. contr. Cresc. l. 4, c. 61, 7%. testantes pretenden ser la regla de su fé y de los Pa—
Segun esta observacion, es necesario entender los orá dres de los primeros siglos, en los que reconocian la
culos sagrados que anuncian la difusion de la Iglesia pureza de doctrina.
sobre toda la tierra en un sentido moral; y esta inter «En el antiguo Testamento la propagacion de la
pretacion es muy conforme á la manera con que se iglesia de Jesucristo sobre toda la tierra se encuentra
espresan comunmente los autores sagrados. Asi lee - predicha por una multitud de oráculos bien claros.
mos en Jeremias que todos los reinos de la tierra esta Me limitaré á referir algunos.
ban bajo el poder de Nabucodonosor, c. 3, y.1; en «Los protestantes profesan como nosotros que Dios
Daniel, que el tercer reino que debia ser el de Alejan hablaba de Jesucristo y de su religion cuando decia á
dro, mandaria en toda la tierra, c. 11, y .39; en S. Lu Abraham: Todas las naciones de la tierra seran bende
cas, que se publicó un edicto del emperador Augusto cidas en cuestra raza. (Gén, c. 12, y. 3 y 18; c. 26,
para hacer el empadronamiento de todo el universo, y. ; c. 38, y. 1). Ahora bien, convienen tambien
TOMO I 51
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con nosotros en que las bendiciones de Dios no son clarado que deben entenderse en este sentido. En una
mas que para los que estan en su Iglesia, y que no las de las apariciones que siguieron á su resurreccion, y
concede ál os miembros de las iglesias que reprueba. que refiere San Lucas, fue cuando, mostrando á sus
Todas las naciones deben, pues, entrar en su Iglesia apóstoles el cumplimiento en su persona de los orácu—
segun la profecia de Dios. los de la ley de Moisés, de los profetas y de los sal
«Los protestantes aplican tambien, del mismo modo mos, añadió: A si ha sido escrito y asi era necesario
que nosotros, al Mesías estas palabras de los salmos: que Cristo sufriese y resucitara el tercer dia de entre
Pedidme y os daré las naciones por herencia y las es— los muertos, y que en su nombre la penitencia y remi
tremidades de la tierra por posesion.... Dominará sion de los pecados fuesen predicados en todas las na—
desde un mar al otro, y desde el rio hasta los límites ciones empezando por Jerusalen. (Luc. c. 2, y. ,
del universo. Todos los reyes de la tierra le adorarán, 5, 6 y 47). Jesucristo mismo, es pues, quien nos
todas las naciones le obedecerán.... Todos los confines enseña que si vemos á su Iglesia estendida sobre toda
de la tierra se convertirán al Señor; todas las familias
la tierra es una consecuencia de los oráculos que lo
de las naciones le adorarán. (Ps. 2, y.8; ps. 71, y.8, habian anunciado; él mismo es el que nos suministra
21; ps. 21, y ; 18). ¿Se puede decir que las iglesias este raciocinio contra los protestantes. Su Iglesia está
falsas que profesan una doctrina contraria á la de Je en donde la colocan los protestantes y en donde, se
sucristo sean su posesion y su heredad al ¿? que gun ellos, la coloca él mismo, en todas las naciones
las rechaza; que le obedecen cuando estan sublevadas de la tierra. Luego toda Iglesia que no exista mas
contra él; que se conviertan á él alejándose de su fé y que en algunas naciones no es la Iglesia de Jesu
ofendiéndole? No hay mas que la Iglesia de Jesucris cristo.
to de quien pueda decirse esto. E"la es la que posee «El nuevo Testamento no está menos espreso que
su reino sobre la tierra, que obedece á sus preceptos el antiguo. Ademas de las palabras de Jesucristo que
es la convertida á él. Ahora bien, segun estas pro— acabo de referir segun San Lucas, le oimos decir á sus
ecías, esta Iglesia debe comprender todas las nacio— apóstoles unas veces: Este Evangelio del reino será
nes, someter á todos los reyes y estenderse hasta los predicado en todo el universo para servir de testimo
límites del universo. nio á todas las naciones; y entonces se verificará su
«Tambien, segun los protestantes, Isaias hablaba consumacion; otras veces: Me ha sido dado todo po—
de Jesucristo, cuando inspirado del Espíritu Santo der en el cielo y sobre la tierra. Id, pues, enseñad en
decia: Es poco para tí el que seas mi servidor para todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Pa
reanimar las tribus de Jacob y convertir la hez de Is— dre y del Hijo, y del Espíritu Santo, enseñándoles á
rael; hé aqui que te he establecido como antorcha de observar todo lo que os he mandado; otras veces: Il
las naciones para que tú lleves la salud que viene á por el mundo entero, predicad el Evangelio á toda
mí hasta las estremidades de la tierra.... El señor ha criatura: otras veces: Recibireis la virtud del Espi
preparado su santo brazo á los ojos de todas las na— ritu que bajará sobre vosotros, y me servireis de testi
ciones, y todos los límites de la tierra verán la salud gos en Jerusalen, en la Judea, en la Samaria, y has
de nuestro Dios (s. c. 9, y, 6; c. 52 y 10). El pro ta los confines de la tierra. (Mat. c. 24, y 1; c. 28;
fela anuncia que la salud debe ser llevada hasta las y. 18, 19, 20; Marc. c. 16 y 13; Act. c. 1, y. 8). Se -
estremidades de la tierra; luego segun sus oráculos la gun estos pasages, compilaremos algunos principios
Iglesia en que solo puede encontrarse la salvacion que pondrán en evidencia nuestro dogma de la calo
debe estenderse por todo el mundo: ahora bien, los licidad.
protestantes admiten como nosotros el principio de 1.° «Se prescribe evidentemente á los apóstoles
¿ no se encuentra la salvacion mas que en la verda en estos testos el predicar el Evangelio á todas las na
ciones del mundo. Esta verdad es tan evidente á la
era Iglesia, luego la verdadera Iglesia debe esten—
derse hasta los confines de la tierra. sola inspeccion de las palabras del Salvador, que se
«Leemos en Malaquias una célebre profecia que ria ridículo tratar de probarla.
los protestantes entienden como nosotros respecto de 2.º «Al ordenar á sus apóstoles que predicasen
la religion de Jesucristo. Yo no pongo ya en vos mi su ley á todas las naciones, Jesucristo les encarga
voluntad, dice el señor de los ejércitos, y no recibiré ba que estableciesen en ellas su Iglesia. Esta ver
ya dones por vuestras manos; porque desde el Levan dad es la consecuencia inmediata de la anterior, y
te hasta el Poniente mi nombre es glorificado entre es igualmente clara. Componiéndose la Iglesia de
las naciones, y en todos los lugares se ofrece y se sacri— los que hacen profesion de la verdadera fé, dando
fica en mi nombre una ofrenda pura (c. 1, 8, 10, 11). á los apóstoles la mision de plantear en todos los
Del Levante al Poniente debe ser glorificado el nom paises la verdadera fé, era mandarles establecer
bre del Señor; en todos los lugares debe presentárse en ellos la Iglesia. No podian hacer lo uno sin lo
le una ofrenda pura; luego su Iglesia debe desde Le Otro.
vante á Oriente, estenderse por todos los lugares, 3.° «Los apóstoles formaron la Iglesia segun les
porque no creo que se diga que Dios tiene su nombre ordenó su divino Maestro. Jamás les han acusado los
glorificado por las iglesias enemigas de la fé, y que protestantes de haber faltado á sus preceptos. IIacen
acepla como puras las ofrendas que le hacen. profesion de reverenciarlos como á unos santos per
«Estas profecias del antiguo Testamento, tan claras sonages. Les atribuyen hasta la prerogativa de la in
y positivas en sí mismas para anunciar la futura di fabilidad.
fusion de la Iglesia entodas las naciones, son todavia 4.° «Los apóstoles fundaron, pues, la Iglesia en to
mas demostrativas por la aplicacion que de ellas ha das las naciones, al menos mientras vivieron y pu
hecho Jesucristo ¿ este objeto, y porque ha de dieron; y seguramente la establecieron en un gran
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número de paises. La historia de su predicacion añade, no hay ningun pueblo, sea griego, sea bár
rueba esto mismo. Leemos en el Evangelio de San baro, cualquiera que sea su nombre, sus costum —
arcos que predicaron en todas partes. (c. 26. bres y hábitos que no dirija oraciones á Dios Padre,
y. 20). San Pablo dice á los romanos que él y sus en nombre de Jesus crucificado. Dial. cum. Tryph.
compañeros habian recibido la gracia del apostolado n. 117. Es verdad que Justino propone este razona
para hacer obedecer la fé á todas las naciones en nom miento á un judio y no á un herege; mas el princi—
bre de Jesucristo; (c. 1, y. 5). A los colosenses, que pio de su raciocinio es tan aplicable á los hereges
la palabra verdadera del Evangelio habia llegado, no como á los judios. Este principio es que segun el orá
solo á ellos, sino á todo el mundo; que fructifica alli culo de Malaquias la verdadera doctrina, el verda—
y se aumenta todos los dias, y que el Evangelio dero pueblo de Dios debe estenderse por todos los
que oyeron habia sido predicado á toda criatura paises del mundo. Asi, segun este Padre, toda doc
que se encuentra bajo el cielo. (c. 1, y.5. 6, 22). trina que no tiene esta difusion, toda sociedad que
5.º «La verdadera Iglesia es la que los apóstoles no goza de esta estension, no son ni la doctrina ni
fundaron segun el precepto de su Maestro. Los protes la Iglesia de Dios.
tantes tampoco disputarán esta verdad. «San Ireneo era, como San Justino, discípulo de
6.” «Luego la verdadera Iglesia es la que se ve los Padres ap ostólicos, y fue instruido por San Poli
universalmente estendida. No concibo cómo des— carp0. Dice, en muchos pasages de su obra cantra
pues de verse obligados nuestros adversarios á con las heregías, que la Iglesia está estendida por toda la
venir á todas las demas proposiciones, pueden ne tierra conservando en ella la fé, lib. 1 , c. 1, n. 1
gar esta. 2; lib. 3, c. 2, n.8; lib. I, c. 26, n. 1. Seguramente
«Asi vemos la catolicidad, es decir, la difusion no hablaba de las sectas heréticas este santo doctor;
universal de la Iglesia, predicha por las profecías, las escluia completamente, pues que escribia contra
prescrita por Jesucristo y efectuada por los apóstoles. ellas, haciendo valer la universal difusion de la Igle
Qué mas puede exigirse para creer en ella? sia conservadora de la verdadera fé.
«Lo que confirma nuestra doctrina sobre la catoli «San Cipriano, en su tratado de la unidad de la
cidad es que el sentido que damos á los pasages de Iglesia, establece tambien su catolicidad en el sen
la Escritura es el mismo que fijaron los Padres de los tido que nosotros la entendemos, diciendo que con
primeros siglos: unos discípulos inmediatos ó casi in serva su unidad aunque está estendida por todos los
mediatos de los apóstoles, otros discípulos de aquellos paises. La presenta iluminada con la luz del Señor
que florecieron en los siglos en los cuales, por con esparciendo sus rayos por todo el universo. La com
esion misma de los protestantes, la fé era pura y la ara á un árbol que estiende sus ramas sobre toda
doctrina sana. a tierra. Pensaba, pues, como los Padres que le ha
«N vemos en los libros santos empleada la pala bian precedido, que una prerogativa de la Iglesia de
bra católico: pero la encontramos aplicada á la Igle Jesucristo es el ¿ por todas las naciones; y
sia de Jesucristo desde la época que siguió inmedia— por una consecuencia necesaria no hubiera renono
tamente á los apóstoles. El símbolo que lleva su nom cido como Iglesia de Jesucristo aquella en que no
bre atestigua la creencia en la Santa Iglesia Cató existiera esta difusion.
lica. San Ignacio, obispo de Antioquia y mártir, que «San Paciano, que en la misma época que S.Ci
habia sido discípulo de San Juan, y que habia visto priano combatia cómo él á los novacianos, dice que
á Jesucristo en su carne, dice que la Iglesia católica la Iglesia es un cuerpo lleno, sólido, esparcido ya por
se encuentra en donde está Jesucristo (ep, ad Smyr todo el universo. Epíst. 3.
nenses, n. 8). La epístola de la Iglesia de Smyrna, «En el siglo siguiente, S. Cirilo de Jerusalen en
con motivo del martirio de San Policarpo, su obispo, una de sus catequesis, esplicando estas palabras del
está dirigida á la Iglesia de Dios y á todas las diócesis símbolo, Yo creo en la santa Iglesia católica, dice: La
de la Santa Iglesia Católica en todos los lugares, y Iglesia es llamada católica ó universal porque está
en ella se lee que este santo obispo recomienda sus estendida en todo el universo desde una á otra estre
oraciones á la Iglesia Católica estendida en todos el midad de la tierra. Hé aqui una definicion de la ca
universo, totiusque Ecclesiae Cathólicae per universum tolicidad precisa y absolutamente conforme á la nues
orbem diffusae mentionem fecerit. (Euseb. Hist. ecles. tra. Es necesario tambien tener presente que es una
l. , c. 15). En esla epístola vemos dos cosas á la obra hecha para la instruccion de los simples fieles,
- vez, la catolicidad de la Iglesia y su estension sobre en donde las espresiones deben ser sencillas y muy
toda la tierra; lo que manifiesta que desde entonces, esactas. Un poco mas abajo, este mismo Padre, com
es decir, desde el tiempo que siguió inmediatamente parando la autoridad temporal con la de la Iglesia,
á los apóstoles, no solo se distinguia la Iglesia de establece esta diferencia: que los soberanos distribui
Dios por el título de Católica, si no que se la daba dos en diferentes lugares encuentran en los límites de
este nombre en razon á su difusion universal. sus estados límites á su poder; pero que la Santa
«San Justino siguió inmediatamente á los discípu Iglesia católica es la única que goza de un poder ilimi
los de los apóstoles que le enseñaron la doctrina de tado y en todo el universo. Cateches, 18, núms. 23 y 27.
su Maestro. Argumentando contra Tryon, que era «Algun tiempo antes, en el concilio de Nicea, Arrio
judio, le prueba, por el testo de Malaquias que he y Euzoquio habian presentado una profesion de fé.
referido, que los judios no son ya el pueblo de Dios. Nosotros creemos, se dice en ella, en una lglesia
Primero, le dice, vuestra nacion no está estendida católica de Dios que se estiende desde sus primeros
desde levante á poniente, y existen paises en que fundamentos hasta los últimos confines de la tierra.
no se ve habitar ninguno de vosotros. Mas despues, Hemos recibido esta fé de los santos Evangelios al
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decir el Señor á sus discípulos: Id, y enseñad á todas ciones que vemos bendecidas al presente en esta pos
las naciones. Sócrates, Hist, eccl., lib. 1.º, cap. 26. teridad. Dadnosla, ó deponiendo vuestro error, reci
Asi, católicos y hereges todos en los primeros siglos bidla, no de mí, sino de aquel en quien son bendeci
profesaban como un artículo de fé que la Iglesia ha das todas las naciones. C. 6. n. 14.
recibido de Jesucristo la prerogativa de la universal «Qué leemos en los profetas? añade. Cuán nume
difusion. TOSOS y evidentes son sus testimonios con motivo de la
A fines del mismo siglo, dos grandes lumbreras de estension de la Iglesia por todas las naciones sobre to
la Iglesia de Africa, S. Optato y S. Agustin, proba da la tierra Isaias nos dice por medio de una reve
ban á los donatistas que su secta no era la verdadera lacion divina que habia visto la Iglesia de antemano,
Iglesia, porque no era católica, es decir, universal de tal suerte que en las palabras del que predecia el
mense estendida. porvenir vemos lo que está sucediendo al presente.
«Tenemos que demostrar, les dice S. Optato, lo que Produce muchos testos de este profeta, y hace ver
hemos prometido que estableceríamos: cuál es esta cuán claramente prueban la estension universal de
Iglesia á quien Jesucristo llama su paloma y su es— la Iglesia. Que el que se atreva á ella, replica, con
posa. Decis que se encuentra entre vosotros única tradiga, pero el que no se la atreva, espere en Jesu
mente. En vuestra orgullo os atribuis especialmente cristo con todas las naciones y no se separe de la uni
la sanidad; de suerte que la Iglesia esté en donde dad de los pueblos que esperan en él, ó si de ellos se
vosotros querais y no en donde no querais. Asi, para separa que vuelva á fin de no perecer... Quién es tan
que pueda estar entre vosotros, en una pequeña sordo, insensato y ciego de entendimiento para atre
parte del Africa, en el rincon de un pais pequeño, es verse á hablar contratestimonios tan evidentes?... ¿Qué
preciso que no se encuentre con nosotros en la otra cosa mas clara puede ecsigirse? Ved en un solo pro
parte del Africa, ni en las Españas, ni en las Galias, feta cuántos oráculos, cuál es su claridad; y no obs
ni en Italia, en donde no estais vosotros El santo doc tante se resiste, se contradice, no á un hombre, sino
tor cita tambien un gran número de paises en los al Espíritu de Dios y á la mas evidente verdad. Y sin
que no existen donatistas y de los cuales escluyen la embargo, los que se vanaglorian con el título de cris
Iglesia, ¿ diciendo: En dónde estará pues tianos, envidian la gloria de Cristo y no quieren que
la propiedad de la palabra católica puesto que la igle. se crea que se han cumplido las cosas que tanto tiem
sia se llama católica porque es razonable y está esten po antes habian sido predichas; tanto mas, cuanto que
dida por todas partes? Pues si la encerrais, porque no son predichas sino demostradas, vistas, poseidas,
así os place, en un paraje estrecho, si la quitais to Ibid c. 7, n. 15, 16, 19
das las naciones ¿en dónde se hallará lo que el Hijo de «S. Agustin opone en seguida á los donatislas los
Dios ha merecido? ¿en dónde lo que le ha prometido salmos, y especialmente el segundo y el selenta y uno.
voluntariamente su Padre diciendole en el salmo; Yo Despues de referir sus pasages véase, pues, dice, có
os daré las naciones por horencia, y los límites de la mo en los salmos se halla manifestada la estension de
tierra por posesion? ¿Por qué infingir una promesa se la Iglesia por todo el universo, sobre lo cual descansa
mejante de suerte que la estension de todos los reinos la gloria de su soberano.... ¿Qué responderán á lo
sea puesta por vosotros como en una prision? ¿Porqué que acabo de referir de los profetas, y de los salmos
quereis sea penosa esta liberaldad? ¿Por qué comba con motivo de la Iglesia de Jesucristo que está es
tis los méritos del Salvador? Permitid al Hijo poseer lo tendida por todo el universo, los que quieren mejor
que se le ha concedido. Permitid al Padre cumplir sus combatirla con perversidad que el comunicar con ella
promesas. Con qué derecho estableceis límites y tra corrigiéndose? c. 8, y 9, núm. 22 y 23.
zais barreras? Cuando Dios Padre concede al Salva «Del antiguo Testamento pasa el santo doctor al
dor toda la tierra nada esceptua en ninguna parte de nuevo. Cita los pasages que he referido: Sobre el de
ella. Toda la tierra con sus naciones es la posesion de S.Lucas opone á los donatistas el razonamiento que
Cristo. S. Optato repite despues el testo del salmo 2, hé hecho mas arriba, á saber; que Jesucristo mismo
y refiere el que he citado del salmo 71. De schism. aplicó á la universal difusion de su Iglesia los pasa
donat, lib. 12. cap. 4. No puede haber cosa mas jes de la ley, de los profetas y de los salmos. Sobre
terminante que este testo para establecer que la ver— el pasaje de las Actas de los Apóstoles dice, que por
dadera Iglesia es la que se vé estendida por toda la él se vé el principio de la Iglesia de Jerusalen, en
tierra, que esta prerogativa le fue concedida por su Samaria, y su propagacion sucesiva en todas las na
divino fundador y que la es esencial. La claridad ciones. Lo prueba por los hechos y por la enumeracion
e idente de este pasaje me dispensa referir otros en de muchos paises en donde se hallaba ya establecida la
los cuales establece S. Optato el mismo principio. verdadera fé, y reasume de la manera siguiente: Nos
«S. Agustin, en su tratado de la Unidad de la Igle— ha sido anunciado que la Iglesia se estableceria sobre
sia contra los donatistas trata er-profeso de la cuestion toda la tierra; el mismo Señor ha atestiguado que es
de la catolicidad, y demuestra con muchos testos de la to estaba predicho en la ley, en los profetas y en los
Sagrada Escritura que la Iglesia de Jesucristo es la salmos. Profetizó que comenzaria por Jerusalen y
que se estiende por toda la tierra. Empieza por el Gé que se estenderia por lodas las naciones. Predijo á sus
nesis, refiere la promesa hecha á Abraham de que apóstoles, cuando subio á los cielos, que serian sus
todas las naciones serán bendecidas en su posteridad, testigos en Jerusalen, en la Judea y Samaria y en to
prueba que esta posteridad es Jesucristo, manifiesta da la tierra. Los hechos están conformes con sus pa
que la promesa fue renovada á Isaac y Jacob; dadnos, labras. Cómo, habiendo comenzado por Jerusalen y
concluye, esta Iglesia si se encuentra entre vosotros; estendídose luego por la Judea y Samaria, y despues
mostradnos que estais en comunion con todas las na sobre toda la tierra, se aumenta al presente, has
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la que por último posea las naciones restantes, en convencerse de la catolicidad de la Iglesia, le basta
dónde no ecsiste en el dia? El testimonio de las Sa estarlo de su catolicidad personal.
gradas Escrituras lo demuestra claramente. El que La estension de la Iglesia no ecsistió desde el prin
evangeliza de otra suerte, que sea anatematizado. cipio, y no siempre ha sido la misma; la catolicidad,
Ahora bien, aquel evangeliza de otro modo porque en el sentido en que nosotros la entendemos, es tan
dice que la Iglesia ha perecido en el resto del mundo antigua como ella y jamás ha variado.
y subsiste tan solo en Africa y en el partido de Do— En el dia algunos protestantes no tienen dificultad
nato. Ibid. c. 10, n. 25, y c. 11, n. 27 y sig. en decir que son católicos, es decir, miembros de la
«Resulta evidentemente de todos estos pasajes, sa Iglesia universal, compuesta de todos los que creen
cados solo del tratado de la Unidad de la Iglesia, que en Jesucristo; pero esto es un abuso grosero de la
no solo este santo doctor profesaba los mismos prin palabra. Cómo puede llamarse Iglesia ese conjunto
cipios que nosotros sobre la catolicidad, sino que ade de sectas que no tienen entre sí, ninguna union, que
mas para probárselo empleaba los mismos razona se miraron unas á otras como heréticas, las demas
mientos que nosotros. Las pruebas con que combati como idólatras y que se dicen múluamente anatema?
mos á los protestantes son con las que él refutaba á Para ser católico es preciso tomar por regla de fé el
los donatistas. Los herejes modernos para ver su con consentimiento unánime de todas las sociedades cris
denacion no tienen mas que enterarse de lo que se tianas que reconocen un solo gefe. Ya hemos pro
objetó á los antiguos herejes. bado en otra parte que uno de los caracteres esencia
«Vemos ademas que en la célebre conferencia de les de la verdadera Iglesia es la unidad en la fé,
Cartago entre los católicos y los donatistas hacian es— en el culto, en la sumision á un gefe. V. IGLEsIA, S. 1
tos consistir la catolicidad, no en la reunion de la uni
y 2. Este carácter solo se encuentra en la Iglesia
versalidad de las naciones, sino en la plenitud de los romana: por lo tanto ella es únicamente la católica.
sacramentos: Brev. coll. cum Donat. dis. 3, c. 3, n. 3.
Lo que no se aleja mucho del sistema protestante. Catolicismo Sistema en el cual se sostiene que
Mas fueron combatidos por los obispos católicos que la catolicidad de la doctrina es la regla de fé, y á
alegaron los testos convincentes de la Escritura sobre la cual debe conformarse todo hombre que crea en
la difusion universal de la Iglesia. Los donatistas no Jesucristo. Como todas las sectas que han aparecido
solo no quisieron discutir esta cuestion, pero ni aun desde los apóstoles se han levantado contra este sis
abordarla. Se limitaron á sostener que la Iglesia de tema, no podemos menos de probar que es el único
Jesucristo no se compone mas que de los hombres verdadero, el solo que puede seguir un hombre que
virtuosos, y no comprende á los pecadores: Ibid. c. 8, se precie de saber discurrir. Bossuet y los demas
y. 10; y esta es todavia una pretension de los pro controversistas lo han demostrado contra los protes
testantes. tantes: hé aqui poco mas ó menos el sumario de
«Hé aqui una cadena de autoridades que abraza y sus reflecsiones.
une todas las épocas desde la promesa hecha á 1." En la religion primitiva la regla de fé era
Abraham. De esto resulta evidentemente que la ver— la tradicion doméstica; los patriarcas no tenian otra:
dadera lglesia de Jesucristo debe por su institucion bajo la ley de Moises la regla de fé era la tradicion
estenderse sobre toda la tierra. Vemos esta esten nacional; Dios lo habia mandado asi. Deut. c. 17,
sion universal predicha en la Ley antigua por una y. 10; c. 32, y .7. Despues, bajo el evangelio destina
multitud de oráculos, mandada por Jesucristo en do á ser predicado á toda criatura y hasta la consu
muchas ocasiones, egecutada por sus apóstoles en macion de los siglos, la regla de fé es la tradicion
tanto que pudieron, realizada poco despues de ellos general. Esta uniformidad del plan de la Providen
y desde los primeros tiempos del cristianismo, vin cia demuestra su sabiduría; es un absurdo el pensar
dicada por los santos doctores como un signo de que Dios haya cambiado. Bajo la primera época de
la verdad de su Iglesia y de la falsedad de las co la revelacion, todos los que perdieron de vista la tra
muniones separadas. Cómo, admitiendo todas estas dicion de las lecciones dadas á Adan cayeron en el
autoridades, pueden negarse á creerlas? Segun ellos, politeismo, Bajo la segunda, siempre que los judios
la Escritura es infalible: por su confesion, los Padres se separaron de los preceptos de su religion nacio
de los primeros siglos no se equivocaban. Cómo, nal se precipitaron en la idolatría y en las supers
pues, podrán sustraerse de la enseñanza unánime de ticiones de sus vecinos. Bajo la tercera, el que re
todos los libros sagrados y de todos estos santos husa consultar la tradicion universal se entrega al
personages?» delirio de una falsa filosofía. Hay tantos ejemplos de
Si por la catolicidad de la Iglesia se entendiera esto como errores ha habido desde los apóstoles has
solamente su estension por todas las partes del mun la nOSOlrOS.
do seria imposible á un fiel ignorante el saber con 2.º La unidad es esencial á la Iglesia de Jesu
certeza que es miembro de la Iglesia católica. Pue cristo; él mismo dice de sus ovejas : «Yo haré un
de muy bien ignorar si está mas estendida que las » mismo rebaño bajo un solo pastor.» Joan, c. 11,
demas sectas, mas no puede ignorar que la Iglesia, y. 6. Segun S. Pablo, los fieles que tienen un solo
de quien es miembro, le propone para regla de fé la Señor forman un solo cuerpo, una sola fé, un solo bau
uniformidad de doctrina entre todas las sociedades tismo. Ephes. c. , y. , y 5. El que se separe de esta
particulares de que se compone; uniformidad alesti unidad no pertenece pues al rebaño de Jesucristo.
guada por la union y sumision á un solo gefe, que es Esta unidad no puede conservarse sino en lanlo que
el vicario de Jesucristo. Esto es lo que un católico las diversas sociedades que componen la Iglesia se
hace profesion de creer al recitar el símbolo. Para sirvan mútuamente de testigos, de maestros y de
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personas que vigilen sobre ellas; de suerte que si Hace mas de mil y ochocientos años que la Iglesía
cualquiera de ellas llegara á estraviarse, todas las de católica no ha variado ni en sus dogmas ni en su
mas pudieran de nuevo encaminarla. La unidad no regla de fé, y esto seria imposible sin la asistencia di
puede hallarse en el error; cada uno se engaña á su vina. Cómo las diferentes Iglesias que la componen,
manera; la unidad es pues un signo infalible de la estando algunas muy lejanas de las demás, se creen
verdad. todas obligadas á conservar la doctrina recibida de
3." El saber si Jesucristo reveló tal doctrina ó una Jesucristo por medio de los apóstoles, no teniendo
doctrina contraria es un hecho. Para comprobar un ningun interés, ni ningun motivo para cambiarla?
hecho cualquiera no se debe uno limitar á consultar Cómo habian de formar una conspiracion general con
la historia, pregunta ademas á la tradicion oral y el designio uniforme de alterarla? No puede apode
á los monumentos. La tradicion es del mayor peso rarse de todas ellas á la vez un mismo espíritu de
cuando los testigos son en gran número, cuando to vértigo, ninguna de ellas puede separarse de la tra
dos están interesados en ser informados del hecho y dicion sin que las demas se aperciban de ello. Siem—
publicarle tal cual es en sí, y cuando estos no son ¿ que uno o muchos particulares, obispos ú otros,
simples particulares sino sociedades enteras. Recu— an tratado de hacer alguna innovacion, el escándalo
sar la certeza moral, llevada asi al mas alto punto ha estallado al punto, y fueron condenados. El cato
de notoriedad, es querer engañarse evidentemente. licismo es pues un principio infalible de unidad, de
.." Desde el origen de la Iglesia, se ha puesto en perpetuidad y de inmutabilidad en la doctrina. Véase
práctica esta regla para juzgar si una doctrina era lgLESIA.
verdadera ó falsa, ortodoxa ó herélica. Reunieronse
los concilios con el objeto de que los obispos de las Católico. Esta voz es derivada del griego KATo
diferentes partes del mundo pudiesen dar testimonio LoU en todas partes, significa universal. Se llama cató
de lo que era creido, enseñado y profesado en sus lica la Iglesia, no solo para manifestar que está di
iglesias. Cuando todos ó el mayor número atestigua— fundida por toda la tierra y en todas las naciones, sino
ron que tal era la creencia que habian hallado esta— para espresar la profesion que hace de creer y ense
blecida, no se dudó en creer que era la doctrina de ñar por todas partes la misma ductrina, de tomar
Jesucristo, y que la opinion contraria era herética. como regla de su fé la universalidad de creencia que
Puede creerse que la Iglesia desde su origen haya es seguida en todas las sociedades particulares de que
padecido error acerca de la regla que debia seguir se compone. Tal es el carácter que distingue la ver
para enseñar á los fieles sin peligro de equivocarse? dadera Iglesia de Jesucristo de las sectas que se han
Era preciso que Jesucristo mismo la hubiese abando separado de ella.
nado en el momento mismo en que acababa de esta Esta es la idea que de ella nos daba S. Ireneo á fines
blecerla. del siglo II. «La Iglesia, dice, aunque difundida por
todo el mundo, conserva con el mayor cuidado la fé
5.º. O es preciso seguir esta regla, ó atenerse solo
á la Sagrada Escritura, como quieren los protestan y doctrina que recibió de los apóstoles y de sus discí
tes; no hay medio. Mas cuando se trata de fijar el pulos. Semejante á una familia que no tiene mas
verdadero sentido de la Escritura y saber cómo de que un corazon, una alma y una misma voz, cree,
be entenderse, es un absurdo el remitirnos á la Es— enseña y predica en todas partes lo mismo por uná
critura. Por una parte un puñado de doctores sostie nime consentimiento. A pesar de la distancia de los
nen que estas palabras de Jesucristo, este es mi cuer lugares y la diversidad de lenguas, la tradicion es
po, deben tomarse en el sentido figurado; por otra uniforme en todas partes, etc.» Adv. Haer. lib. 1.º
todas las iglesias del universo atestiguan que las han c. 10, núm. 1 y 2. S. Agustin no hace mas que co
entendido en el sentido literal. Se preferirá á esta iar esta nocion escribiendo contra los donatistas, li
creencia general y constante la opinión particular de ro de Unit. Eccles. n. 56; Tract. 3, in Epist. Joan
un pequeño número de novadores? Tertuliano y S.Cipriano se sirvieron de esta idea an
6.º. Todas las sectas que han abjurado el catoli tes de S. Agustin para refutar á los hereges. Tal es
cismo no han hallado entre sí un centro de reunion; tambien el sentido que dá Bossuet á la palabra cató
sucesivamente han caido de un error en otro. Véa lico, primera Inst. part. sobre las promesas de la
se en el artículo Error el encadenamiento de aque Iglesia, n. 29.
llos en que incurrieron los protestantes. Se han divi— Algunos autores han pretendido que Teodosio el
dido en luteranos, calvinistas, arminianos, gomaris Grande fué el primer autor de esta denominacion, que
tas, anglicanos, cuákueros, hernhutas, hermanos mo habia dado lugar á ella mandando por medio de un
ravos, pielistas, socinianos, coccianos, etc. Hubiera edicto que el título de católica se diera con preferen
sido mayor el desorden y mas frecuentes los rompi— cia á las iglesias que seguian las decisiones del concilio
mientos, si la rivalidad entre estas sectas y la Iglesia de Nicea. Vossius juzga que esta palabra no se puso en
católica no les hubiera refrenado muchas veces: no el símbolo hasta el siglo III. Pero estas dos opiniones
estan unidas sino por el odio que las anima contra la son inadmisibles. En las cartas de los fieles de Smyr
verdadera Iglesia. Despues de haber sacudido el yu na respecto al martirio de S. Policarpo que es del año
go de la tradicion universal se han visto obligadas á 169, se habla de la lglesia católica en Euseb., libro
atenerse á su tradicion particular, á las decisiones de l, c. 15. Valvos en sus notas sobre la Hist. eccles. etc.
sus sínodos, á confesiones de fé, á mandatos de los
Euseb. lib. 8, observa que el nombre de católica fué
magistrados y hasta emplear las censuras y las pe dado á la Iglesia desde el tiempo mas prócsimo á los
nas para mantener en su seno una unidad al menos apóstoles para distinguirla de las sociedades heréticas
aparente. que de ella se habian separado. Efectivamente S. Ig
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nacio, mas antiguo que S. Policarpo, dice en su carta unidad, pues que nunca pudieron convenir en una
á los fieles de Smyrna, núm. 8: «En donde esté Jesu misma profesion de fé. 3." Jamás quisieron tomar
cristo, allí se encuentra la Iglesia católica.» A princi como regla el consentimiento universal y la uniformi
ios del siglo II, Celso llamaba ya á la Iglesia cató— dad de creencia. En qué sentido podian atribuirse la
ica la grande Iglesia para distinguirla de las sectas catolicidad? Convenimos en que la estension de una
heréticas, Oríg. contra Celso, lib. 5, n.59. S. Cirilo secta y la multitud de sus partidarios considerada
y San Agustin observan que los mismos hereges y los absolutamente nada prueba, pues que siempre ha co
cismáticos daban este nombre á la verdadera Iglesia, menzado por un pequeño número; mas habiendo pro
de la cual se habian separado, y los ortodoxos la de metido Jesucristo á su Iglesia el reunir todas las nacio
signaban con el nombre de católica únicamente, ca nes, es un absurdo el querer que el cisma de una parte
tholica. de sus miembros prevalezca sobre el cuerpo entero.
Con efecto, ninguna secta herética ha querido ja Los patriarcasó primados de Oriente tomaron el tí
más atenerse á profesar la doctrina católica ó univer tulo de católicos; se decia el católico de Armenia pa
sal, la doctrina uniformemente enseñada por todas ra designar al primado ó principal obispo de Armenia,
las sociedades particulares que componen la grande título muy semejante al de ecuménico que habian to
Iglesia. Lejos de someterse á esta condicion comun, mado los patriarcas de Constantinopla. Sin embargo,
como á una regla de fé, siempre han acriminado por parece que el título de católico era menor que el de
este método á la Iglesia romana; heregia y catolicidad patriarca; los nestorianos, obligados á retirarse á la
son dos términos contradictorios; el primero designa Persia, llamaron á su obispo principal católico; no se
nna doctrina de la que se ha hecho una eleccion par atrevieron á denominarle patriarca, á pesar de ha
ticular: el segundo una doctrina profesada en todas berlo sido de Gonstantinopla, Nestorio. Este nuevo ti
partes. Bossuet, primera instruccion pastoral sobre tulo no fue instituido sino en tiempo de Justiniano en
las promesas de la Iglesia, n. 23, 29. el siglo VI. Véase Renaudot, Disert. sobre el patriar
Así, cuando nosotros decimos en el símbolo: Creo en ca de Alejandria, núm. 4.
la santa Iglesia católica, entendemos: creo que la
verdadera Iglesia de Jesucristo es la que hace profe Caucambardistas: Rama de eutiquianos que
sion de enseñar la doctrina universalmente recibida en el siglo IV siguieron el partido de Severo de An
desde los apóstoles en todas las sociedades particula tioquia y de los acéfalos. Rechazaban el concilio de
res que forman esta gran sociedad. Este carácter no Calcedonia, y sostenian, como Eutiques, que no habia
es difícil de discernir; la Iglesia romana es la única mas que una sola naturaleza en Jesucristo. Se les lla
ue se lo atribuye: todas las sectas heréticas lejos mó caucaubardistas por el lugar en que tuvieron sus
e conformarse con él, se lo echan en cara como un primeras reuniones. Nicéforo, lib. 13, c. 9; Baronio,
error. En el artículo CATolicismo hemos probado que año 335. Algunos los llamaron contobabdistas, y otros
este carácter es esencial á la religion de Jesucristo y condabaudistas. Véase EUTIQUIANos.
Bossuet lo ha de nostrado. Ibid.
No sabemos lo que entiende un protestante cuando Causa. Los teólogos, asi como los filósofos, se ven
dice recitando el símbolo de los apóstoles: Creo la obligados á distinguir muchas especies de causas. No
santa Iglesia católica, ni en qué sentido puede atri solo conocemos una causa primera, que es Dios, sino
buir este título á la sociedad particular de que es tambien causas segundas, que son las criaturas. En
mienbro. Esta sociedad ni es la que está mas esten tre estas la causa puede ser material ó formal, eficien
dida de todas las comuniones cristianas, ni la mas te ú ocasional, final ó instrumental, fisica ó moral,
antigua; no tiene relacion alguna ni con la Iglesia total ó parcial, próxima ó remota, etc. El detalle de
griega cismática ni con ninguna de las demas Iglesias todas estas pertenece á la metafísica, y puede sumi
orientales; todas estas sociedades estan de acuerdo nistrar materia para un tratado muy estenso.
con la Iglesia católica en condenar á los protestantes. Los ateos nos dicen sériamente que no es necesario
Mr. Bossuet observa con mucha razon que cuando que el universo tenga una causa primera; que él es
se dice Creo la santa Iglesia católica, no solo signi causa de sí mismo, que siempre ha existido y exis-.
fica creo que existe, sino yo creo lo que ella cree: de tirá; que todo lo que sucede es un efecto necesario de
otra manera no seria creer que existe, pues que el las combinaciones y del movimiento de la materia.
fondo, y por decirlo asi, la esencia de su ser es la Segun esta sublime filosofía, todo es necesario en
fé que declara á todo el universo. Espíritu de Leib el universo y todo cambia, todo se hace en él des—
nizt, t. 2, p. 101. de la eternidad y se sucede; las combinaciones de la
No obstante, se nos hace una objecion. En el si materia son necesarias en general, ninguna lo
glo 1V, cuando los arrianos se prevalian de su gran es en particular, pues, que con mucha frecuencia
número, los Padres les respondieron que la multitud en nosotros está el cambiarlas ó modificarlas segun
de los errantes no prueba nada. En el V, los ca nuestra voluntad. Aun cuando no tuviéramos un con
tólicos echaban en cara á los nestorianos su corto nú vencimiento íntimo é invencible de esta verdad, lo ab
mero, y estos hereges á su vez repitieron la respuesta surdo y las contradicciones del lenguaje de los ateos
que se habia dado á los arrianos. Lo mismo acon bastarian para convencernos de la necesidad y de la
teció con los eutiquianos. Estas sectas fueron mas existencia de una causa primera, inteligente y li
católicas por haberse estendido mas? bre, que ha hecho el mundo tal cual es, y que hu—
Respuesta. Sin duda que no; pero, 1.º es falso que biera podido hacerlo de otra manera si asi lo hubiera
los arrianos hayan sido jamás en mayor número que querido. Véase Dios.
los católicos. 2."Nunca hubo entre ellos la menor Este mismo convencimiento íntimo, que es el gra
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do soberano de la evidencia, nos dice que somos ver hijos; á un amo que hace á su criado insolente, etc.
daderamente activos y no puramente pasivos como la Es esta su intencion? Sin duda que no; nadie se enga
materia, y por lanlo la causa eficiente y propiamente ña en esto; se concibe en todas estas maneras de
dicha de nuestras acciones. Mas como la é nos ense hablar la ocasion se toma por la causa; nada se de
ña que no podemos hacer ninguna accion meritoria duce de esto. ¿Por qué nos hemos de escandalizar
para la salvacion sin el auxilio de la gracia, la gran cuando encontramos el mismo estilo en la Sagrada
cuestion es el saber si la gracia divina es la causa f— Escritura?
sica de nuestras acciones meritorias, ó solo la causa Nosotros preguntamos á un hombre ¿ bru
moral, asi como los motivos que nos determinan son tal: «¿Es preciso maltratarme por haber querido ser
repulados como causa de nuestras acciones comunes. viros?» Decimos de un estudiante cuando ha aprove—
Llanmamos causa física á un ser cualquiera en cuya chado poco: «Eslá poco instruido para haber estu
presencia siempre acaece lo mismo, de tal suerte que diado con tan hábiles maestros.» En estos modos de
en su ausencia nunca se verifica; asi, el fuego es re hablar, el para no espresa ciertamente la causa, sinó
putado causa física de la luz, del calor, de la quema el suceso.
dura, porque sus efectos siempre se hacen sentir mas Jesucristo dice en el Evangelio: «Yo no he venido
ó menos cuando el fuego está presente, pero nunca á traer la paz, sino la espada.» Mat., c. 10, y.3%. Su
cuando no existe: la coexistencia constante de estos intencion no era el dividir á los hombres, pues que
fenómenos nos hace concluir que el uno es causa del constantemente predicó la dulzura y la paz; mas pre
otro, que hay una conexion necesaria entre ambos; veia que por la malicia é incredulidad de muchos, su
no tenemos otro signo para juzgar de esto; ignoramos doctrina seria entre ellos una causa accidental, ó mas
la razon á priori porque el fuego produce la luz, el bien una ocasion ó motivo de division; advertia á sus
calor y la quemadura. Mas esta casualidad físic no apóstoles sobre los obstáculos que tendrian que vencer
tiene lugar sino entre un cuerpo y otro cuerpo: no para establecerla. En el mismo sentido se dice de él,
puede suministrarnos idea alguna acerca del modo con que fue establecido para la ruina y resurreccion de
que la gracia obra en nosotros. muchos en Israel. Luc., c. 2, y .34. Que el Evangelio
Una causa moral se conoce por el signo contrario; sus ministros son para los unos un olor mortal que
no siempre produce el mismo efecto, y con frecuen— os mata, y para los otros un olor de vida que los rea
cia un mismo efecto es determinado por diferentes nima. I Cor., c. 2, y. 6, estos no son hebraisinos,
causas. Asi, un mismo motivo puede hacer que prac como muchos han dicho, sino galicismos puros. Lo
tiquemos muchas acciones que no se parezcan, y una repetiremos otra vez; estos modos de hablar son co
misma accion puede ser determinada por muchos mo munes á todas las lenguas.
tivos diferentes: estos, pues, no pueden ser mas que Por consiguiente, la conjuncion, ut de la version
causa moral de nuestras acciones; entre esta causa y latina no siempre debe traducirse al francés por á fin
sus efectos no hay mas que una conexion contingente. de que, como si espresara la intencion del que obra;
No obstante, un hombre que sugiere motivos á otro sino por de manera que, espresion que solo designa lo
que manda, aconseja ó escita á hacer una accion, se que se sigue á una cosa, aun contra la voluntad del
reputa tambien como causa moral; se le imputa lo que obraba. En el Ecodo, c. 11, y, 9, Dios parece que
mismo que al que la ha hecho. dice á Moisés: Faraon no os escuchará, á fin de que se
¿Sucede lo mismo con la gracia? Propiamente hagan prodigios en Egipto. Era esta la intencion de
hablando, un motivo que nos determina á obrar no Faraon? Es preciso traducir necesariamente de ma
nos dá fuerza nueva; la fuerza se considera en nos nera que se harán, ó yo haré prodigios, etc. Jesucristo
otros como independiente del motivo. Ahora bien, la dice á los judios: «Vosotros mismos atestiguais que
gracia nos dá una fuerza que no tenemos naturalmente. sois los hijos de los que mataron á los profetas.» Mat.
No existe, pues, una semejanza exacta entre la casua capítulo 23, y.31. Los judios no tenian la menor in
lidad moral y la de la gracia. Debemos admirarnos si tencion de atestiguarlo; pero es una consecuencia que
el modo con que la gracia obra en nosotros es un se seguia de su conducta. Los apóstoles les dicen: «Pues
misterio, del que no podemos tener una idea, por lo que rechazais la palabra de Dios, y que os juzgais in
que pasa por otra parte en nosotros, y de que las dis dignos de la vida eterna, nosotros nos pondremos al
pulas sobre la eficacia de la gracia sean intermina lado de los paganos.» Act., c. 13, y. 6. Los judios no
bles? V. GRAGIA, S. IV. - pensaban de esta manera; pero su indignidad era una
Hay Imas: con frecuencia la Sagrada Escritura pa— consecuencia de su incredulidad. Jesucristo habia aña
rece que nos dá como causa de un acontecimiento lo dido: «Vosotros perseguireis y malareis á mis discí
que no era mas que su ocasion; este equívoco dá ma pulos á fin de hacer caer sobre vosotros toda la sangre
teria á los incrédulos para mil vituperios y declama— de los justos, etc.» Mat., c. 23, y.3 y 35; á fin, no
ciones. Si estuvieran menos preocupados, verian que desigua aqui la intencion, sino el acontecimiento.
esta falta, si lo es, es comun á todos los pueblos y á Tambien usamos en francés del mismo equívoco,
todas las lenguas; es muy frecuente en la nuestra. cuando incomodados decimos á un hombre: por
Nosotros decimos, por ejemplo, este hombre me in cierto que merecia la pena el ir allá para hacer una
comoda, es causa de mi condenacion; acaso no haya necedad semejante, ó no era cosa de trabajar tanto
ninguna intencion en ello, su conducta es solo la oca— para salir lan mal parado. Al decir, esto no tratamos
sion y no la causa de las pasiones que nos dominan. de echarle en cara semejante intencion. Asi, cuando
Se dice á un jóven que los atractivos de una muger le San Pablo dice: « La ley ha venido para aumentar
vuelven loco; á un bienhechor que hace ingratos; á el pecado, » Rom., c. 5, y . 20, ninca deducimos
un padre que por su cariño mima y echa á perderá sus que era esta la intencion de Dios; creemos que se
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preciso traducir. La ley ha venido de manera que el otros me habeis hecho servir para vuestros pecados.
¿ se ha aumentado y esta es la observacion que Acaso los judios tenian poder de hacer contribuirá
dce San Juan Crisóstomó.
Dios para sus pecados? Sin duda que no; mas por su
Es verdad que San Agustin ha dado á este pasage obstinacion los beneficios de Dios no servian más que
un sentido mas rigoroso dice que Dios dió espresa para hacerlos mas criminales é ingratos.
mente la ley á los ¿? aumentar el pecado, á Por el contrario, lo que es verdadera causa de un
fin de que, convencidos de la necesidad de la gracia suceso se halla espresado algunas veces en la Sagra—
por la multitud de sus transgresiones, implorasen el da Escritura como si no hubiera contribuido á ello.
ausilio de Dios. L. 3, contra duas epist. Pelag. c., En Jerem. Thren. c. 5, y. 16, los judios dicen: «Mal—
n. 7, elc. Mas esta esplicacion no parece muy con dicion á nosotros, y nosotros hemos pecado», es decir,
forme con el príncipe establecido por San Pablo, de por ó por qué hemos pecado: la conjuncion hebrea no
que no se debe hacer el mal para que suceda el bien ndica solo la consecuencia accidental sino el efecto
(Rom. c. 5, 8), ni con lo que dice el Eclesiástico del pecado.
(c. 15, y. 21), que Dios no ha dado lugar á ninguno San Agustín, se dirá, se ha servido de todos los
ara pecar. El santo doctor ha entendido como San ¿ con que argumentan los incrédulos para pro
uan Crisóstomo el pasage de San Pablo respecto de ar que Dios es verdaderamente la causa de la mali
la ley antigua (L. f. ad Simplic. q. 2, n. 17 y lib. 2, cia, y del endurecimiento de los pecadores. Cuando
contra advers. legis et proph. c. 11, n. 36). La otra Juliano le responde que los decadores han sido aban
esplicacion no es incontestable. donados á sí mismos por la paciencia divina San
De la misma suerte, cuando la Escritura parece Agustin sostiene que, segun San Pablo, ha habido un
que atribuye á Dios la ceguedad, los errores, la in— acto de paciencia y un acto de poder; y lo prueba con
credulidad, el endurecimiento de los pecadores, no estos mismos pasages: Contra Jul. lib. 5, c. 3, n. 18;
concluiremos como Calvino, como los maniqueos y c. , n. 15, etc.
los incrédulos, que Dios mismo puso en su corazon No es cierto que San Agustin haya sostenido esta
estas malas disposiciones, sino que su paciencia, sus doctrina; él mismo se ha servido del pasage del Ecle
beneficios, sus amenazas ó sus castigos no han pro— siástico, que acabamos de citar, para refutar á los
ducido mas que este funesto efecto; que lo ha permi e hacian recaer sobre Dios la causa de sus pecados.
tido y que no ha hecho uso de su omnipotencia para . de grat. et. lib. arb. c. 2, n. 3. Dice que Dios en
impedirlo. En este sentido está escrito que Dios sus durece, no dando malicia al pecador, sino haciéndole
citó un enemigo á Salomon, III Reg. c. 11, y.23; que misericordia. Epist. 19 ad Sistum, c. 3, n. 15. Que
Dios mandó á Semei maldecir á David, II Reg. c. i6, si le endurece no haciendo misericordia, no es por
10; que envió un espíritu de mentira á la boca de que dé al hombre lo que le hace mas criminal, sino
os falsos profetas, III Reg. c. 22, y.22; que les ha e no le da lo que le haria mejor, ad Simp.
dado un espíritu de vértigo, Isaias c. 19, y 1; que ib. 1, q. 2, n. 15, es decir, una gracia tan fuerte
los ha seducido, c. 63, ... 17; Jerem. c. 20, y.7; como fuera preciso para vencer su obstinacion. Tract.
que los ha engañado, Ezeq. c. 14, y 9, que ha en 53 in Joan. n. 6 y sig. En esto mismo consiste el acto
tregado á los filósofos á un sentido réprobo, Rom. c. 1, de poder que Dios egerce entonces; este poder no bri
.28; que ha enviado un espíritu de obstinacion, ibid. lla en ninguna parte con mas esplendor que en la
.8; que ha tendido un lazo de error. I. Thess., c. 2, distribucion que hace de las gracias, segun le place
y. 11; que ciega á los pecadores, los endurece, los mas los pelagianos no querian que el pecador tuviese
vuelve sordos á las aunonestaciones, Erod. c. 4, y. necesidad de gracia, -

21; Rom. c. 9, y . 17, 18, etc. Dice el sanio doctor que Faraon mismo endureció
Sin cesar repite la Escritura que Dios es santo, su propio corazon, y que la paciencia de Dios fue la
enemigo del crimen, que no le manda, sino que le ocasion de esto mismo. L. de grat. el lib. arb. n. 45;
prohibe y le castiga; que detesta la impiedad, que serm.57, n; 8, in ps. 10, n. 17. Sostiene que Dios
no engaña, no seduce ni tienta á ninguno: dice que no nos ayuda nunca á pecar, de pecc. merit. et re
los pecadores mismos se ciegan y endurecen. Dios no miss. lib. 2, n. 5, que cuando nosotros decimos á Dios
tiene la menor parte en esto. No citaremos mas que que no nos deje caer en la tentacion, le pedimos que
un solo pasage con este motivo: «No digais: Dios me no nos deje caer en ella abandonándonos. Epist. 157,
falta, no hagais lo que prohibe. No añadais: él es el n. 16. De dono persev; n. 9 y 12, etc. . -

ue me ha estraviado, porque no tiene necesidad de Orígenes, San Basilio, San Gregorio Nacianceno
os impíos.... El Señor á nadie ha mandado hacer San Juan Crisóstomo y San Gerónimo, esplicaron del
mal; no da lugar á que peque ningun hombre, no mismo modo los pasages de la escritura que alañen
quiere aumentar el número de sus hijos infieles y per al endurecimiento y que parecen atribuirá Dios la
versos». Eccles. 15, y. 11. causa del pecado. Sin ninguna razon, pues, Calvino,
Cien espresiones equívocas no pueden oscurecer Jansenio y otros muchos han pretendido beber en San
una verdad tan clara; las que hemos citado no po Agustin las impiedades que sostuvieron, y es una in
dian engañar á los judios asi como nuestros discursos justicia por parte de los incrédulos el afirmar que
ordinarios no engañan á nuestros conciudadanos. Si San Agustin tenia las mismas opiniones que Janselio
los incrédulos encuentran en ello un lazo de error y y Calvino. V. GRACIAS. Ill.
un motivo de pertinacia es porque quieren; Dios no CAUSAS FINALES. La cuestion de las causas f
es el autor de su pertinacia como tampoco del endu nales parece que corresponde mas bien á los filósofos
recimiento de los pecadores. que á los teólogos; mas la sagrada Escritura en la
En Isaias, c. 3, y. 2, dice Dios á los judios: Vos- historia de la creacion atribuye el autor la natu
TOMO I
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366) CAU
raleza un fin, un designio en la produccion de los di por un fin no es para él una necesidad sino una per
ferentes seres; nos enseña que Dios ha hecho lo uno feccion; obra así, no porque es indigente, sino por
para servir á lo otro, que despues de haber acabado que es inteligente, sábio y bueno. Nosotros pregun
tamos si el obrar á ciegas sin saber lo que se hace y
su obra vió que todo era bueno. Supone, pues, que hay sin
causas finales; se trata de saber si los raciocinios y erario es mayor perfeccion que el obrar por
las hipótesis de los materialistas pueden echar abajo Ull l),
esta doctrina. Hay, en verdad, muchos séres cuya utilidad ó cau
O el mundo, tal como existe, es hijo del acaso y de sa final no vemos, del mismo modo que hay fenóme
una necesidad ciega, ó es la obra de una causa inte nos cuya causa física ignoramos; mas de que no
ligente: no cabe medio. Todo podria ser de otra suerte conozcamos todas las causas no se deduce que no co
que es sin que de ello resultará ninguna contradiccion; nozcamos alguna. Un estudio asíduo de la naturaleza
no hay, pues, en ello necesidad. Ahora bien, ciertos hace que descubramos todos los dias nuevos fenóme
séres dependen de los demas y no pueden subsistir nos y nuevas causas físicas, luego puede manifestar
sin ellos: esta relacion de dependencia es constante é nos tambien causas finales que nos eran desconocidas.
invariable; no es obra del acaso, ha sido el designio Se replica: si Dios ha destinado para nuestra con
de una causa inteligente y libre. servacion y bienestar lo que en efecto contribuye á
Cuando obra una inteligencia sabe lo que hace, ello, tambien ha destinado para nuestra desgracia y
conoce su accion, y desea el efecto que debe seguirse; destruccion lo que nos hiere y mata; ¿en dónde es
tá el motivo para bendecir la bondad y sabiduría del
cuando produce una causa física prevee y quiere el Criador?
efecto que resultará; de otra suerte obraria á la vez
como causa inteligente y como causa ciega, lo que es Si esta bondad y sabiduría infinita hubiere deter
un absurdo. El efecto es, pues, el objeto inmediato ó minado concedernos sobre la tierra una felicidad com
el fin próximo que un ser inteligente se propone al pleta y constante, una vida esenta de todo mal físico,
producir una causa física, y esta causa es el medio. Dios lo habria hecho, sin duda hubiera dispuesto los
Asi, la investigacion, las causas finales, no es mas seres de manera que ninguno pudiera dañarnos; mas
que la investigacion de los efectos producidos por las debia suceder asi? Desde que se argumenta sobre el
causas físicas. origen del mal, formando de esto la base de mil ob—
Pues que ciertos seres contribuyen como causas fi jeciones, ¿se ha llegado á demostrar que el bien
sicas á la conservacion y bienestar de los demas, la estar concedidoálas criaturas vivientes por una bondad
inteligencia del Criador es la que ha establecido esta infinita no debe ir mezclado de ningun grado de mal,
relacion, no es fortuita, imprevista ni necesaria res que el bien es un mal, á menos que no sea absoluto y
pecto de esto; hubiera podído hacerlo de otra suerte aumentado hasta el infinito? Jamás podrá probarse
y quiso hacer lo ¿ existe; luego los seres que sir esto, porque es un absurdo. Por consiguiente, sin de
ven para la utilidad y necesidades de los demas es— rogar la bondad divina, creemos, conforme á la Sa
tan destinados por el Criador para este uso y con este grada Escritura y á la recla razon, que solo Dios, prin
fin; luego los últimos son la causa final de los prime— cipio del bien, es tambien autor de los males, Isaias,
ros. No vemos en qué peca esta demostracion. capítulo 5, y .7; Amós, c. 3, y. 6, etc., y que nada
Ahora bien, entre los seres vivientes aquel á quien se sigue contra las causas finales. V. MAL.
Dios ha dado mas facultades y mas talento para hacer Los filósofos modernos que se levantaron con calor
servir á su bienestar las demas criaturas es sin duda contra las causas finales no nos parece que conside
alguna el hombre; pues Dios ha formado estas cria raron la cuestion bajo su verdadero punto de vista; se
turas para ventaja y bienestar del hombre, á pesar reduce á saber si el universo es el resultado de una ne
del abuso que se pueda hacer de ellas contra la in— cesidad ciega, que nosotros llamamos acaso, ó la obra
tencion del Criador. Esta doctrina de la Sagrada Es— de un ser inteligente y libre que obra con conocimien
critura tiende á hacer al hombre reconocido, agrade lo y eleccion. Dirán que la constitucion del universo
cido y religioso; los sofismas con que se la ataca no no denota á punto cierto la operacion de una causa
pueden hacer mas que volvernos estúpidos é irra inteligente? En este caso nosotros les preguntaremos
cionales. cuál es la señal por la cual podemos distinguir el pro
Se dice que atribuyendo á Dios designios y un fin, ceder de una causa inteligente del de una causa ciega:
le hacemos obrar á la manera del hombre: este se mas esperaremos mucho tiempo la respuesta.
propone un fin porque tiene necesidad de ello, Dios Desde el momento en que se pierden de vista las
no necesita ni fines ni medios. causas finales y se desconoce en la marcha del uni
Acusándonos de un sofisma y de una comparacion verso la mano de un Dios bueno, sábio y poderoso,
falsa, ¿no son nuestros adversarios los que hacen lo el estudio de la naturaleza se vuelve árido, insípido,
uno y lo otro? Hé su raciocinio: cuando el hom muerto, sin fruto y sin atractivos; la fisica, la histo
bre se propone un fin y pone los medios, es porque ria natural, la cosmogonia, la botánica, etc., se re
tiene necesidad de hacerlo así; luego si Dios hace lo ducen casi á una simple nomenclatura y á un mera
mismo, es lambien por necesidad. Rechazamos esta nismo ciego, cuyo principio y causa no se perciben.
consecueucia. Dios no tenia necesidad de crear el Si por el contrario, todo se refiere á una providencia
mundo, sin embargo, lo hizo; no tenia necesidad de atenta y bienhechora, el corazon se conmueve y el
producir tal efecto fisico por medio de tal causa, mas entendimiento se vé satisfecho: el hombre conoce que
quiso que asi sucediera; no tenia necesidad de ali ocupa una posicion en el universo, bendice al autor
mentos para conservar los seres vivientes, no obstan de su ser y se hace mejor.
te, estos no pueden conservarse de otra suerte, Obrar Obrar por una causa final con designio é intencion
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es el carácter de los seres inteligentes ¿ , y las Es preciso convencerse de que esta cautividad no
acciones practicadas de esta suerte son las únicas ca era una dura esclavitud; que los judios, bajo el domi
ces de moralidad, las únicas que nos son imputa nio de los reyes Asirios, Medos ó Persas, eran abso
les. Masya hemos hecho observar en el artículo lutamente desgraciados. Prescindiendo del egercicio
anterior, que muchas veces la Sagrada Escritura pa público de su religion, que no les era permitido, ni
rece atribuir á una intencion, á un designio formado, posible, gozaban de todos los derechos de súbditos;
á una causa final lo que sucede contra la intencion esto lo vemos en las historias de Tobias, Susana y Es—
ó sin la intencion del que obra; se espresa de esta ther. Poseian tierras y las cultivaban; muchos fueron
manera, ya respecto de Dios, ya respecto de los elevados á las dignidades y gozaron de un gran cré
hombres. San Mateo, por egemplo, hace á las cir— dito en la corte. Muchos judios se encontraron tam
cunstancias de la vida del Salvador la aplicacion de bien en la Asiria que no quisieron volver á la Judea
muchas profecías que, segun el sentido de un profe— cuando Ciro les concedió la libertad.
ta, parecian tener otro objeto: dice, c. 2, y. 15, que En el dia, cuando se pregunta á los judios por
Jesus, niño, permaneció en Egipto hasta la muerte de Dios, á pesar de las promesas que hizo á sus pa
Herodes, para cumplir ó á fin de cumplir lo que res, los ha reducido hace mas de mil y ochocientos
habia sido dicho por un profeta. Yo he llamado á mi años á un estado mucho mas deplorable que la cauti
hijo del Egipto; Oseas dijo estas palabras hablando de vidad de Babilonia, por qué crímen los ha dispersa—
los israelitas, c. 2, y . 1, y probablemente los padres do y humillado en todas las naciones del universo
de Jesus no tenian el menor designio de cumplir esta sino por haber condenado á muerte al Mesias, res
prediccion. Dice, y, 23, que Jesus permaneció en Na ponden que su cautividad presente es una continua
zarel para cumplir lo que se dijo por los profetas: cion ó una estension de la cautividad de Babilonia, y
será llamado Nazareno, y es probable que los profe ¿ en el dia están pagando aun las prevaricaciones
tas no hacian ¿ medio de estas palabras ninguna e sus padres. Es una especie de proverbio entre ellos,
alusion á la ciudad de Nazaret. El evangelista, pues, que no les sucede ninguna calamidad en la cual no
solo entiende que estas palabras y las anteriores se ¿ por lo menos una onza de adoracion del becerro
cumplieron otra vez y en un sentido diferente del que 0 0'0.
tal vez habia tenido presente el profeta al escribirlas. Dejando á parte lo absurdo de esta preocupacion,
San Pablo, Galat. c. 2, y. 1, dice á San Pedro: la Sagrada Escritura nos suministra pruebas positivas
«Vosotros obligais á los gentiles á judaizar.». No era de lo contrario.
este el designio de San Pedro; mas su conducta podia 1." . Los mismos profetas que anunciaron la cau
dar lugar á los gentiles á deducir que estaban obli tividad de Babilonia, predijon tambion su fin: Jere
á judaizar, ú observar las ceremonias de la mias declara terminantemente que no durará mas
ey de Moisés. Todos los dias decimos tambien en las º setenta años, y Daniel lo comprendió asi leyen
conversaciones familiares: me habeis obligado á ha o á este, profeta. Jerem. c. 25 y 29; Dan. c. 9. Un
cer tal cosa, es decir, vuestra conducta ha sido para ángel revela á, Daniel que estos setenta años eran un
mí un motivo de hacer lo que he hecho. compendio de las setenta semanas de años que tenian
No se pueden repetir mucho estas reflexiones, que pasar para la venida del Mesias. Ibidem., y.2%.
rque los incrédulos y aun algunos teólogos han Esto es bien claro.
echo un abuso enorme de equívocos semejantes, que 2.º El edicto de Ciro permitió á todos los judios,
se encuentran, tanto en la Sagrada Escritura, comoen sin escepcion, el volverá su patria; los términos son
los Padres de la Iglesia. Quieren convencernos de que esplícitos é ilimitados. 1. Esdras, c. 1, 3.3. El autor
el hebreo es una lengua estrordinaria, ininteligible, de los Paralipómenos reconocia en los últimos versí
que no se parece á ninguna otra, que significa todo culos del segundo libro que este edicto puso fin á la
lo que se quiere, porque no se han tomado el traba cautividad: es una pertinacia el sostener lo contrario,
º e compararla con ninguna otra, ni aun con su 3.° Daniel y Nehemias reconocian que las amena
ngua materna, en la que encontrarian los mismos zas de Moises en el Deuteronomio fueron cumplidas
pretendidos contrasentidos y los mismos inconvenien en Babilonia. Dan. c. 9, y . 11 y 12; Il Esdr. c. 1,
tes. V. HEBRAIsmo. y. 8. En efecto, Moises dice á los judios que serian
transportados con su rey á una tierra lejana; que ser
Cautividad de Babilonia. Habia anuncia virian alli á dioses estraños, dioses de madera y pie
do Moisés, de parte de Dios, á los Israelitas que si no dra. Deut. c. 28, y.36. Esto no puede aplicarse á su
observaban fielmente su ley, los trasportaria fuera cautividad presente; no tienen ya rey, ni están obli
de la tierra prometida, y los entregaria al poder de gados en ninguna parte á adorar los ídolos.
una nacion estrangera. Deut., c, 28, y . 9 y 64; mas ...º Cuando los judios se quejan en Babilonia de
que si volvian á él los restableceria en su libertad. que Dios les habia hecho pagar la º de las pre
c. 30, y. 1 y sig. Como bajo sus reyes se entregaron varicaciones de sus padres, Ezequiel les dice que es
con frecuencia á la idolatria, contrajeron costum to es falso, que son castigados por sus propios críme
bres muy corrompidas, Dios es anunció por medio nes. Ezeq. c. 18. Los del dia hacen mal en repetir
de sus profetas, que iba á cumplir sus amenazas, que esta queja absurda de sus abuelos.
toda la nacion seria sometida á los asirios y trans De esto deducimos contra ellos que el crímen por
portada á Babilonia; mas les prometió que á los se el cual son castigados hace diez y ocho siglos, no solo
tenta años los libraria y conduciria á la Judea. Jerem: es un crímen nacional, sino personal de todos los judios,
c. 25, y. 11 y 12; c. 26, y . 10. Todo se cumplió y ninguno hay que reuna estos dos caracteres mas
segun lo anunciado. que deicidio que cometieron en la persona de Je
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sucristo. Es un crímen nacional, porque los gefes de umnas de esta Iglesia, creyeron oportuno que con
la nacion le rechazaron y le condenaron á muerte; Bernabé predicára á los gentiles, asi como ellos pre
el pueblo tambien tuvo parte en él porque gritó: Que dicaban los circuncisos. «Mas añade S. Pablo, ha
su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos, biendo venido Cefas á Antioquia le resistícara á cara
Es un crímen personal á todos los judios en particu porque era reprensible. Antes de la llegada de algu
lar, porque todos los que no han creido en Jesucristo nos judios que vinieron de parte de Santiago co
aplaudieron la conducta de sus padres, y han tratado mia con los gentiles: desde su llegada se retiraba y
de justificarla: en el dia todos ellos blasfeman tambien andaba como escondido, por temor de desagradará
contra este divino Salvador. los circuncisos, y efectivamente atrajo á muchos con
Que su suerte actual haya sido ó no predicha por este disimulo: Como yo viese qne nó obraban segun
la profecía del Deuteronomio es indiferente; la de la rectitud del Evangelio, dije á Cefas delante de todo
Daniel es bien terminante: declara que desde el ase el mundo: Si tú que eres judio vives como los gentiles
sinato del Mesias, la devastacion y desolacion de los por qué quieres obligarles á judaizar, etc.?»
judios duraria hasta el fin del mundo. Dan. c. 9, La cuestion es el saber si este Cefas, reprendido por
}.27. Jamás han dado ninguna razon sólida contra S. Pablo, es el apóstol S. Pedro ó un discípulo de este
esta prueba concluyente. mismo nombre. Los antiguos se dividieron sobre esta
cuestion. Orígenes, Didymo, Apolinar, Eusebio de
Cazinzardemos. Hereges Armenios del si Edesa, Teodoro de Heraclea, S. Juan Crisóstomo, y
glo VII, llamados asi por Nicéforo, de la voz chasus, Teodoreto, entre los griegos; Tertuliano, S.Cipriano,
ue en su lengua significa cruz. Tambien se les ha S. Gerónimo, S. Agustin, el autor llamado Ambro
ini, Staurolatras porque de todas las imágenes siaster, S. Gregorio el Grande, y Santo Tomás, entre
no honraban mas que la cruz. Eran nestorianos que los latinos, y el mayor número de comentadores han
admitian dos personas en Jesucristo, y á los cuales creido que este Cefas, es el apóstol S. Pedro. Están
echa en cara Nicéforo muchas supersticiones, lib. 18, por la opinion contraria S. Clemente de Alejandria en
c. 5. Por lo demas son poco conocidos, y no parece sus hipótesis, Eusebio ¿ refiere el pasage sin con
que fueron en gran número, tradecirlo, Doroteo de Tiro, en una crónica pascual,
muchos escritores de los cuales habla S. Juan Crisós
Ceras. Nombre que Jesucristo dió á Simon, hijo tomo, S. Gerónimo y S. Gregorio que vivian en su
de Juan, cuando se lo presentó su hermano Andres, tiempo, el autor de la Crónica de Alejandría, que
Joan. c. 1, y 2. -
¿ ia en el siglo VII y OEcumenio que murió en el
Cefas, en siriaco, significa piedra como lo esplica siglo XI.
S. Juan. De aqui los apóstoles que escribieron en grie
g0, ¿? S. Pedro PETRos, y los latinos Petrus; ¿ se trata, no de un punto de dogma, sino de
historia y de crítica, el Padre Hardouino ha creido
no obstante en algunos pasages le conservan el nom— que debia decidirse por razones mas bien que por au
bre de Cefas. Tal es la etimología que dan de este toridades, pues que no hay sobre esto testigos con—
nombre Tertuliano, S. Gerónimo S. Agustin y la temporáneos; hizo en 1709 una disertacion para pro
mayor parte de los comentadores. Algunos han crei bar Cefas no es el apóstol S. Pedro. El abate Boi
do que Cefas venia del griego REPHALE, cabeza, mas leau lo ha refutado en otra disertacion en 1713. Dom
Jesucristo no habla en griego, y S. Mateo escribió en Calmet, que refiere razones en pro y en contra en una
siriaco. Dijo, c. 16, y, 18: Tú eres Cefas y sobre es disertación sobre este mismo asuntó, Biblia de A vi
ta cefa edificaré mi Iglesia. En las versiones griega y ñon. t. 15, p. 705, se decide por la opinion del abate
latina cambiaron el nombre Petra en el de Petrus, Boileau.
que conviniera á S. Pedro; mas ¿ 10 Cada uno de estos autores arregla la cronología de
ay que alterar nada: Tu eres piedra, y sobre esta pie una manera favorable á su opinion; pero como no es
dra edificaré mi Iglesia. mas que una conjetura por una parte y otra, no nos
Jesucristo quiso dará entender que, elevando á San detendremos en este punto, La principal dificultad es
Pedro á la dignidad de gefe de los apóstoles, le hacia saber si la” disputa de S. Pablo con Cefas tuvo lugar
la piedra fundamental de su Iglesia. Porque añade antes ó despues del concilio de Jerusalen, en el cual
que este edificio no será derribado sino que subsistirá se decidió que los gentiles no estaban obligados á ob
hasta el fin de los siglos, es preciso que la autoridad servar la ley de Moisés como pretendian los judios.
de S. Pedro haya pasado á sus sucesores, y que su El P. Hardouino dice que fue antes del concilio,
silla sea siempre el centro de unidad á que deban ate. orque si S. Pedro hubiera cometido la falta de que se
nerse los fieles para ser miembros de la Iglesia. Asi e acuSa, ¿ de haber juzgado él mismo la causa
raciocinaron los Padres, y despues de ellos los teólo— contra los judios y á favor de los gentiles, su conduc
gos; los hereges y los incrédulos han hecho vanos es— ta en Antioquía seria inescusable. Dom Calmet no pa
uerzos para obscurecer esta verdad. rece quedar suficientemente satisfecho con esta pri
Un pasage de la epístola de S. Pablo á los Gálatas, mera objecion del Padre Hardouino.
c. 2, y. 1 y sig, ha dado lugará una disputa sobre el Este hace observar, en segundo lugar, que S. Pa
nombre de Cefas; dice el apóstol que, catorce años
blo en la epístola á los Gálalas, llama tres veces á San
despues de su conversion, ó despues de un viage que Pedro PefRos, c. 1, y 18; c. 2, y. 7 y 8; que
habia hecho á Jerusalen, hizo otro, durante el cual no es probable que en el y, 9 le ilame Cefas: el mo
conferenció sobre el Evangelio con los apóstoles, y en do con que habla de este seria muy indecoroso con
particular con los que representaban alguna cosa; respecto á S. Pedro. Pudo decir de él: Yo conferencia
que Santiago Cefas y Juan, que parecian ser las co ré con los que parezcan ser alguna cosa, y. 2; los que
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parecian ser algo, nada me han dado, y. 6, despues de los infieles que estan en las tinieblas, y de todos
de haber dicho, c. 1, y. 18: Yo vengo á ¿ los pecadores que estan ciegos. Cuando esta ceguedad
á ver á Pedro y permaneceré en su casa por espacio es voluntaria, sin duda alguna es criminal; sino lo
de quince dias ¿Es probable que en estos quince dias fuera, no seria imputable.
S. Pablo no se hubiese aprovechado nada de las ins— No obstante leemos en muchos pasages de los li
trucciones de S. Pedro? Es mucho mas natural creer bros santos que Dios ciega á los pecadores, á los im
que Santiago, Cefas y Juan, de los cuales habla, }.6, pios, á los incrédulos, ¿cómo deberemos enlender es
y9 ¿ ## ¿ recio, no fuesen tres io? Muchas veces reprende Dios á los pecadores su ce
apóstoles sino tres discípulos
tento S. Pablo. p de los que no estaba
est con -
guedad, ¿puede serelautor de ella? No indudablemen
te. Dice, Sap. c. 2 y.25, que los pecadores estan ciegos
Responde Dom Calmet, que pues S. Pedro tenia por su propia malicia; II
dos nombres, S. Pablo podia servirse indiferentemen de este siglo ó las pasionesCor, c., y. 4, que es el dios
divinizadas las que han ce
te de ellos; mas no satisface á la segunda parte de la gado el entendimiento de los infieles; por lo tanto no
objecion. es Dios el autor. San Pablo dice que el corazon de los
. En tercer lugar, en la primera epístola á los Corin falsos sabios ha sido cegado, porque habiendo cono
tios, c. 1, y. 12. S. Pablo los reprende porque entre cido á Dios no le han honrado, de suerte que son ines
ellos los unos decian: Yo soy de Pablo; los otros: Yo cusables. Rom. c. 1, y.20 y 2 : ha sido pues culpa
soy de Apollo; aquellos: Yo soy de Cefas; estos: Yo suya y no de Dios. San Juan dice que el que aborrece
soy de Jesucristo. Fuera de ser muy dudoso que S. Pe á su hermano no ve claro, que las tinieblas le han
dro haya jamas predicado en Corinto, tuvo allí discí vuelto ciego, mas nos advierte que Dios es la luz, y
pulos particulares, y fue llamado Cefas y no PETRos. que en él no hay tinieblas. Joan, c. 1. y.5; c. 2, y.12;
¿Puede nadie persuadirse que S. Pablo solo le colocara la ceguedad, pues, no viene de Dios. Dice que el
en tercer lugar, y despues de un simple discípulo? Ha Verbó divino es la verdadera luz que alumbra á todo
ce lo mismo hablando, c. 9, y.5, de los apóstoles, hombre que viene á este mundo, Joan.c, 13 y.9; no
de los hermanos del Señor y de Cefas. En esto habria esceptúa á los pecadores.
una afectacion muy notable.
Dios repite continualmente á los judios: Sed santos;
Por mas que se diga que no se trataba de arreglar porque yo lo soy; ahora bien, la santidad de Dios con -
los puestos, el lugar que ocupaba S. Pedro entre los siste en que probibe el pecado y le castiga; no puede
apóstoles ecsigia mas atenciones que S. Pablo mani pues contribuir á él en manera alguna, «Dios, dice el
festó á Cefas. -
Sabio, detesta al impio y á su impiedad». Sap. c. 14:
Las demas razones que alega el P. Hardouino no y.9». «Y no da lugará que peque nadie». Ece. c. 15
parecen muy sólidas, y no se puede aprobar su afec 3.21. Dios no quiere ni aunque se diga que abando
tacion al preferir la leccion de la vulgata á la del tes na á los pecadores, ihid. y. 11, con mas razon seria
to griego. una blasfemia el pensar que los ciega, que les, quila
En el fondo, esta contestacion no nos parece muy absolutamente toda la luz de la gracia. Por último,
importante. Aun cuando Cefas reprendido por S. Pa Jesucristo dice terminantemente á los judios: «Sivos
blo fuese el apostol S. Pedro, aun cuando este hu otros estuvierais ciegos, no hahriais pecado, es de
biera alabado hasta el esceso la preocupacion de los cir, no ¿ del pecado que cometais rehu
judios, su falla no le pareceria muy grave. S. Pablo sando creer en mí», Jaan. c. 9, y.1. Esto nos pare
mismo, por deferencia á los judios hizo circuncidará ce bien claro.
su discípulo. Timoteo se purificó en el templo é hizo No obstante Calvino cita veinte pasages con que
las oblaciones prescritas por la ley. Act. c. 16, y. 3; pretende probar que Dios ciega positivamente á los
c. 21, y. 21. Por lo tanto juzgaba muy apropósito, lo cadores; los incrédulos no cesan de repetirlos; mu
mismo que S. Pedro, tener algunas condescendencias chos teólogos abusan de ellos para decir que hay pe
respecto de las preocupaciones de los judios con quie cadores á quienes Dios niega las gracias de la conver
nes era preciso no chocar de frente. Aun cuando San sion; es preciso pues ecsaminarlos en particular. La
Pedro no hubiera desde luego calculado las conse cuestion es muy importante; se trata de saber si te
cuencias que de ello podian resultar, esto no seria un nemos que habernoslas con ciegos voluntarios.
crimen. Con mucha injusticia los herejes y los incré Observemos desde luego que en todas las lenguas,
dulos han tomado ocasion de este hecho para calum aun en la nuestra, hay dos equívocos muy comunes.
niará estos dos apóstoles; en la conducta de uno y otro El primero es decir que un hombre hace lo que per
no se encuentra ningun rasgo de hipocresía, ni de ma mile hacer, lo que no trata de impedir en tanto que
la fé. Los protestantes que dedujeron de esto que puede; asi, se atribuyen á un magistrado los desórde
S. Pedro no era infalible, han jugado con el término; nes que no impide, á un padre las pasiones de su hi
á lo mas debian deducir que S. Pedro no era impeca jo cuando no las reprime, á un amo el libertinage de
ble. Qbservar una conducta de la cual puede deducirse un criado sobre el cual no vigila. Los Padres de la
una falsa consecuencia y un error, no es enseñar por Iglesia dicen á los ricos que no ausilian á los pobres:
esto el mismo error. S. Pedro pudo haber pecado en vosotros no los habeis alimentado, los habeis matado:
su conducta, sin haber por ello faltado en su doctrina. Non pavistis, occidistis, y estotan solo significa, los ha
Ceguedad espiritual
beis dejado perecer. Decimos á un im rudente, que se
. Consiste en no co ha proporcionado desgraciaspor falta de prevision de
nocer la importancia de la salvacion, el precio de las precaucion: tu lo has querido, etc. El segundo que ha
gracias de Dios, la enormidad de nuestros pecados, la ce referencia al mismo objeto es llamarcausa loquesolo
necesidad de hacer penitencia, etc. La Escritura dice es ocasion; asi decimos bruscamente á un hombre tº
 CEG 370 CEG
me haces encolerizar, cuando su carácteró su conducta hablaba espresamente á los judios en parábolas, á fin
son para nosotros una ocasion de despecho y de cóle de cegarlos y endurecerlos. Quél unas parábolas sen
ra, aun contra su intencion; la verdadera causa es sibles y comparaciones palpables no eran la leccion
nuestra impaciencia y muchas veces la rareza de mas propia para abrir los ojos de un pueblo grosero
nuestro carácter. Decimos á un jóven enamorado lo— y obstinado? Se trataba de la parábola de la semilla,
camente de los atractivos de una muger: Esa belleza imagen de la palabra de Dios, y de las causas que
os ciega, os vuelve loco; y con frecuencia ella lo ignora impiden que no fructifique; este enigma no era muy
6 se incomoda de esto. Se dice de los grandes que dificil de comprender. -

rodigan sus beneficios, que hacen ingratos; este no Sin embargo, dicen los incrédulos; Jesucristo da
ebia ser el fruto de los beneficios. ruebas del poco deseo que tenia de abrir los ojos á
En este doble sentido se dice que Dios ciega á los os judios; cuando sus discípulos le preguntan : «Por
pecadores: 1.”Porque no les concede luces tan abun qué hablais en parábolas á estas gentes? responde:
dantes y poderosas como era preciso para disipar fá— porque se os ha concedido el conocer el misterio del
cilmente su ceguedad; mas el esceso de su pertinacia reino de los cielos, al pasoque no les es dadoá ellos».
no es un título para ecsigir de Dios mayores gracias, Ibid. y 11. En seguida esplica á sus discípulos en
2. "Porque la paciencia con que los espera, los bene— particular el sentido de la parábola, y no al pueblo.
ficios que les concede, les persuaden de que siempre Mas, ¿por qué no les era dado á los judios el cono
será lo mismo, y que Dios no les castigará. Dios di cer los misterios del reino de Dios? Porque no que
ce á los judios, Isaias c. 3, y .2%: vosotros me ha— rian; Jesucristo les dice terminantemente: cerraban
beis hecho servir para vuestras propias iniquidades, los ojos y se tapaban los oidos. Si le hubiesen pedido
es decir, habeis abusado de mis beneficios para ofen alguna esplicacion con el designio de aprovecharse
derme. Todas estas maneras de hablar abusivas y fal de ella, se la hubiera dado lo mismo que á sus dis
sas en buena lógica, no deben sorprendernos ni en cípulos.
francés ni en ¿ , ni en los autores sagrados, ni Nada de eso, replican los incrédulos; segun San-.
-

entre los escritores profanos. Marcos, c., y. 11, Jesucristo dice á sus discípulos:
El pasage mas fuerte que hay cerca de esta ma «Se os ha dado á conocer los misterios del reino de
teria se encuentra en el profeta Isaias, c. 6, y. 9. Dios, al paso que á los estraños todo se les dice en
Dícele Dios: «vé y díá ese pueblo, Escuchad y no oi parábolas, á fin de que vean sin conocer, que escu
qais, ved y no comprendais. Endurecido el corazon chen sin oir, por temor de que se conviertan y que
de ese pueblo, tapadle los oidos y cerradle los ojos, los pecados les sean perdonados». -

por temor de que vea, oiga y comprenda, que nó Mala traduccion por cierto; Iva en griego, ut en
se convierta y que yo no le cure. Hasta cuándo, Se latin, no significan á fin de que, sino de manera que;
ñor? Hasta aqui sus ciudades se encuentran sin ha seria un absurdo suponer que Jesucristo hablaba,
bitantes, sus casas desiertas, y sus tierras sin cul instruia y reprendia á los judios á fin de que no escu
tivo». Si se tomara este pasage á la letra, nada se chasen V no se convirtiesen. Véase lNTENCION.
ria mas absurdo. 1.° Seria una contradiccion de En el mismo sentido, dice Jesucristo, Joan. c. 9,
parte de Dios el enviar un profeta á los judios para y. 39: «Yo he venido á este mundo para egercer
reprenderlos; si tenia el designio de cegaros y endu un juicio, de manera que aquellos que no vean sean
recerlos, ya lo estaban. 2.° Isaias no tenia seguramen alumbrados, y los que vean se pongan ciegos». Lo
le el poder de hacerlos peores que eran. Es pnes evi— que sigue de la esplicacion. Los fariseos le pregunta
dente que esto es una prediccion y no un mandato; ron: «¿Estamos, pues, ciegostambien nosotros¿Si lo es
el sentido es: «ve á decir á ese pueblo: Vosotros es tuviérais, replicó el Salvador, no habriais pecado, mas
cuchais y no ois, veis y no comprendeis. Mas dejadle decís, nosotros vemos; vuestro pecado está perenne».
endurecer su corazon, taparse los oidos y cerrarse Luego si la ceguedad de los fariseos hubiera proveni
los ojos, porque teme ver, oir y ser curado: y esto do de Jesucristo y no de su pertinacia, hubiesen es
durará hasta que el esceso de sus desgracias le haga tado esentos de pecado. -

entrar en sí mismo». Esta amenaza era evidente— En Joan. c. 12, y.37, leemos tambien: Aunque Je
mente mas propia paraconvertir á los judios que para sus hizo tan grandes milagros en presencia de los ju
cegarlos; es el lenguage de un padre irritado contra dios no creian en él, de manera que cumplian lo que
sus hijos, pero que quiere se ennienden con el obje dijo Isaias: Señor, ¿quién ha creido lo que nosotros
to de evitar su castigo. hemos anunciado, quién ha reconocido la obra de
Este pasage de Isaias se repite cinco ó seis veces vuestro brazo ?» No podian creer, porque Isaias dice
en el nuevo Testamento. Mat., c. 13, y . 13, dice Je— tambien: «Dios los ha vuelto ciegos y ha en durecido su
sucristo á los judios: «Yo les hablo en parábolas, por corazon, de manera que no pen, etc.». Con este mo
que miran y no ven, escuchan y no oyen, y no com tivo dice San Agustín: «Si se me pregunta por qué
renden nada. Asi se cumple con este motivo la pro— no podian creer, responderé desde luego que porque
ecia de Isaias, que les dijo: Vosotros escuchareis y no querian... Si no podian era culpa de la voluntad
no oireis, mirareis y no vereis. El corazon de este humana.... Eran tan orgullosos que querian su pro
pueblo está empedernido: apenas abren los oidos, pia justicia no la de Dios». Tract. 53, in Joan.
cierran los ojos, por miedo de ver, oir, comprender, in. 6 y 9. Todos los dias decimos en el mismo sentido:
convertirse y ser curados». Asi el Salvador atribuye Este hombre no puede resolverse á hacer tal cosa ; y
á la malicia voluntaria de los judios lo que la profe esto solo significa que no quiere, que lo rehusa con
cía parecia atribuir al mismo Isaias. Apesar de esta obstinacion.
evidencia, los incrédulos concluyen que Jesucristo Se sostendrá todavia que los judios rehusaban creer
 CEL 371) CEL
d fin de cumplir la prediccion de Isaias, y que Dios Mat. c. 22, y: 16, y Marc. c. 12, y 13; mas esta
los cegaba positivamente á fin de hacerlos incrédu congetura no tiene ninguna probabilidad. Poco antes
los? No solo se dirán dos absurdos, sino que se con del sitio de Jerusalen los celadores se reliraron á esta
tradecirá al evangelista: añade que no obstante mu ciudad, en donde egercieron crueldades inauditas;
chos de los principales judios creyeron en Jesucristo, Josefo el historiador las refiere detalladamente.
mas que no se declaraban á causa de los fariseos y
or temor de ser echados de la Sinagoga. Pues que Celdilla. Diminutivo de la voz celda que en
os principales creyeron, correspondia á los demas el otro tiempo significaba un lugar cerrado y por con
hacer lo mismo. siguiente un monasterio. Es una habitacion pequeña
El mismo lenguaje vemos en San Pablo. Hablan habitada por un religioso ó una religiosa y que forma
do de la incredulidad de los judios, les aplica tam parte de un convento. Comunmente está ocupada por
bien la prediccion de Isaias, Act. c. 28, y 2% y sig. una cama ó tarima... una silla, una mesa, algunas
Rom. c. 11, y.7; mas añade que á pesar de su obs imágenes y algunos libros de piedad; lo demas seria
tinacion los ama Dios todavia á causa de sus padres, su pérfluo. -

que los ha dejado en la incredulidad lo mismo que Un religioso que se ocupa en su celdilla en rezar,
¿ los gentiles á fin de tener piedadde todos. y.28 y 32. leer, meditar, escribir y hacer algunas obras de ma
No era pues á fin de que permaneciesen ciegos é in no, es mas feliz que un gran señor en un vasto pala
crédulos. cio. Si entra por casualidad en uno de esos palacios
En el siglo II, San Ireneo dió ya esta respuesta á los que encierran las obras maestras de las artes y mue
marcionitas que abusabandelos pasages que acabamos bles preciosos de los que nunca se sirve el dueño pue
de ecsaminar. «El mismo Dios, dice, es el que ciega á de decir como un antiguo filósofo: Cuántas cosas de
los incrédulos que le desprecian, como el sol, su cria que no tengo necesidad!
lura, ciega á los que no pueden mirar su luz á causa En la Tebaida habia tres desiertos habitados por
de alguna enfermedad de los ojos, y quien concede solitarios ó anacoretas, el uno llamado de las celdillas,
una luz mayor y mas perfecta á los que creen en él y el otro de la montaña de Nitria, el tercero de Secta,
le siguen... Como conoce todas las cosas de antemano, era el mas distante del centro del Egipto y confinaba
deja en la incredulidad á aquellos cuya resistencia con la Libia.
revee, los abandona y los deja en las tinieblas que
¿ elegido por sí mismos». Adv, Haer. lib. I, c. 29. Celebrante. Se llama asi en la Iglesia romana
Tertuliano responde poco mas ó menos de la misma el obispo ó sacerdote que ofrece el santo sacrificio de
manera á estos hereges, lib. 2, ado. Marc. c. 1 y la misa para distinguirle del diácono, del subdiáco
Orígenes, de princip. lib. 3. c. 1, n. 11. no y de los demas ministros que asisten al altar.
Sin embargo, San Agustin parece haber creido que El abate Renaudol en su Coleccion de las liturgias
Dios ciega positivamente á los pecadores para casti orientales y el P. Lebrun en su Esplicacion de las cere
gar sus pasiones desarregladas: Spargens poenales monias de la misa, l. 1, etc., hacen ver que en to
caecitates super illicitas cupiditates, Confess. lib. 1, das las comuniones cristianas está en uso que el cele
c. 18, n. 29; y lo ha repetido mas de una vez. Mas brante se prepare para ofrecer el sanlo sacrificio por
tambien esplicó diferentes veces lo que entendia por la confesion de sus pecados, si tiene necesidad de ¿
esto » Dios dice, ciega y endurece abandonando y por el retiro, las vigilias, las oraciones, y por la ma
no ausiliando»., Tract.53 in Joan. n. 6. «El que cae orpureza tanto interior como esterior. El oficio de
en la ceguedad de entendimiento está privado de la a noche y de la mañana es una parte de esta prepa
luz interior de Dios, mas no enteramente mientras racion; mas hay lambien otras oraciones que deben
ecsiste en este mundo». Enar. ín ps, 6, n. 8. Aplica precederá la celebracion; algunas tiene que decirlas
á Jesucristo todo lo que se dice del sol en el salmo 18. el sacerdote al tiempo de tomar las vestiduras sacer
«Cuando el Verbo se hizo carne, dice, y cuando re dotales, y todo lo que precede al cánon no está repu
vistiéndose de nuestra mortalidad se dignó habitar tado mas que como una preparacion para la consagra
entre nosotros, no quiso que ningun hombre pudiera cion de la Eucaristía. Siempre se ha creido que el ce
escusarse de estar en las sombras de la muerte y el lebrante debe traer para esta grande accion disposicio
calor del Verbo penetró en ellas». V. GRAGA, S. Ill; nes mas santas y perfectas que el simple fiel para re
ENDURECIMIENTo. - - cibir la comunion.
De esta conducta de la Iglesia cristiana es facil
Celadores ó celados. Llamábanse asi cier concluir que en todos los siglos se ha tenido del sacri
los judios que hicieron mucho ruido en la Judea hácia ficio de la misa una idea muy diferente de la que las
el año 66 de nuestra era cuatro ó cinco años antes de sectas heterodoxas han ¿ de la ceremonia que
la toma de Jerusalen por los romanos. Se dieron á sí ellas llaman cena. El dogma de la presencia real, que
mismos estos nombres á causa del celo escesivo la Iglesia católica cree ha debido establecer entre su
y mal entendido que manifestaban por la libertad de culto y el de aquellas, la diferencia enorme que vemos
su patria. y el aparato de su culto es tan antiguo como ella. Véa
-

Se les llamó tambien sicarios ó asesinos en razon se LiTURGIA. -

á los asesinatos frecuentes de que se hicieron culpa Cuando un sacerdote recuerda que lo que se llama
bles; se creian con derecho para esterminar al que en el dia misa solemne, es la misa de los primeros si
- no quisiese imitar su fanatismo. Algunos autores han glos, es lo suficiente para hacerle comprender que el
creido que eran los mismos sectarios que se compren hábito de ofrecer todos los dias este santo sacrificio
den en el Evangelio bajo el nombre de herodianos, no los dispensa de la preparacion.
 *

CEL 372 CEL

En el viaje que el soberano pontífice Pio VI hizo á monasterios de Mezl, de Sens, de Termes, de Am
la Alemania en 1782, los protestantes, asi como los bert, de Vichi, de Esclumont, de Villeneuve, de
católicos, se sorprendieron de la magestad, del res Ofremont, de Lachatre; de Rouen, de Limoy, de A—
peto y de la piedad con que vieron celebrar el santo miens y de Leon han sido suprimidos por breves par
sacrificio de la misa. ticulares de Pio VI en 22 de mayo de 1776, en 8 de
enero de 1779, y en 30 desetiembre de 1778, auto
XX Celestino. (Derecho eclesiástico). Es un re rizados con los despachos reales registrados en el par
ligioso que vive segun la regla del Papa Celestino V. lamento de París, quedando secularizados los religio—
Este Pontífice, antes de ser elevado a la cátedra de sos celestinos. Sin embargo, el papa y el rey han con
San Pedro, y cuando solamentese llamaba Pedro Mo cedido permiso para que continuaserviviendo en for
ron, fundó en 125% una congregacion de religiosos re ma de comunidad religiosa algunos de ellos que se
formados del Orden de San Bernardo. Se estableció retiraron al monasterio de Marcousi, en la diócesis de
primeramente en el monte Mayella, en Italia, y Ur París; pero aun no se sabe, ni se ha fijado la suerte
no IV la confirmó en el año 126, el Papa Gre de este monasterio. En virtud de un decreto del con
gorio X en el segundo concilio general de Leon; diez sejo del dia 2 de octubre de 1778, los comisionados
años despues la concedió en sus bulas varios privile que nombró el rey pasaron á la comprobacion del in
ios y esenciones, una de las cuales era la de la juris ventario de los bienes muebles é inmuebles que les
¿ de los ordinarios, del pago de los diezmos de pertenecian, y se habia hecho anteriormente en vir
tud de los decretos de 2 de octubre de 1772 y 29 de
sus frutos y ganados. Luego pasó de Italia á Francia
esta Orden hácia el año de 1300, en el reinado de Fe mayo de 1776; haciendo salir del monasterio á los re
lipe el Hermoso, que les concedió dos monasterios, ligiosos, luego que se concluyó la comprobacion del
uno en la selva de Orleans, en un sitio llamado Am inventario, y confiando la administracion de sus bienes
bert, y otro en el bosque de Compiegne, en el monte al receptor general del clero, bajo la inspeccion y au
Chartres. En 1318 se establecieron en París en una toridad de los comisarios regios con la obligacion de
casa que les edificó Pedro Martel, hacendado de alli. pagar de dos en dos meses anticipadamente las pen
Esta casa era en Francia cabeza de la Orden ó casa siones señaladas á cada religioso para su manuten
matriz, y tenia otros veinte y tres conventos, que to cion. (Estracto del Diccionario de Jurisprudencia.).
dos ¿ gobernados por un provincial electivo ca
da tres años por el capítulo particular de los Celesti Celtibato, Comtimemela. Estado de los que
nos del reino. Este provincial tenia la misma potestad han renunciado al matrimonio por motivo de religión.
sobre los monasterios de Francia que el general en to. La historia del celibato considerado en sí misma, la
dos los de la Orden. La casa de París gozaba sobre idea que tuvieron de ella los pueblos antiguos, las le—
los emolumentos del sello una cuota semejante á yes hechas con el objeto de abolirle, los inconvenien
la de los secretarios del rey, la cual, siendo Cárlos, tes que de él podian resultar en otras circunstan
delfin de Francia les habia concedido mientras que cias diferentes de las nuestras son tratados estraños al
estuvo detenido el rey Juan su padre en Inglaterra. objeto de la teología. Nosotros debemos limitarnos á
En 1673 mandó Luis XIV que en vez de esta cuota se ecsaminar si la Iglesia cristiana ha tenido razones sa
les diesen sobre los emolumentos del sello setenta y tisfactorias para sujetará él á sus ministros, y autori
cinco libras por trimestre. No nos estenderemos ha zar el voto en el estado monástico; si las pretendidas
blando de esta Orden que ya no subsiste en Francia. ventajas que resultarian del matrimonio de los sacer
Luis XV por un edicto de 1768 tenia mandado que se dotes y de los religiosos son tan ciertas y sólidas como
restableciese la conventualidad en todas las casas re se ha querido suponer en nuestros dias.
ligiosas, y de consiguiente cada una de las Ordenes Los críticos de esta disciplina de la Iglesia convie
que estaban establecidas en el reino se debian reunir nen ya en que el celibato, considerado en sí mismo, no
en capítulo general para proponerle los medios que es ilegítimo, cuando se establece por una autoridad
juzgasen conducentes para conseguir el fin. divina; que Dios, sin duda alguna, puede manifes—
Los celestinos se reunieron en el mes de octubre de tar que la práctica de la continencia le es agradable,
1770 en Limoi-les Mantes. Asustados con la propo . y efectivamente asi lo manifestó.
sicion de una reforma, pidieron unánimemente que Jesucristo despues de haber dicho: «Bienaven
se les dispensase de la egecucion del edicto de 1768, turados los limpios de corazon, porque ellos verán á
y corsintieron en la total estincion de su Orden. El Dios». Mat. c. 5, y. 8, añade en otra parte: «Hay
rey dió á conocer sus intenciones al Papa Clemen eunucos que han renunciado al matrimonio por el rei
te XIV, el cual dirigió un breve á los obispos de Fran no de los cielos; el que pueda entenderlo ponga
cia encargándoles que visitasen todos los monasterios atencion.... El que dejase á su familia, á su esposa,
de celestinos que estaban situados en sus respectivas á sus hijos, sus heredades, á causa de mi nombre,
diócesis. Luego que este breve se autorizó con los recibirá el céntuplo, y conseguirá la vida eterna».
despachos reales registrados en debida forma, los Mat. c. 19, y 2, 29. «Si el que viene á mí no
obispos, como comisarios y delegados de la Santa Se está dispuesto á dejar á su padre, á su madre, á su
de, procedieron á la visita que en él se mandaba. De esposa, á sus hijos, á sus hermanos, á sus hermanas y
la sumaria resultó claramente lo imposible que era su propia vida, no puede ser mi discípulo». Luc.
establecer la reforma, porque insistian los religiosos c. 1, y. 26, Tal es, en efecto, el sacrificio que los
en pedir la secularizacion. Viendo este resultado el apóstoles se vieron obligados á hacer: ó permanecie
Papa, procedió á la supresion de los monasterios par ron el el celibato, ó todo lo abandonaron para entre
ticulares sin estinguir la Orden completamente. Los garse á la predicacion del Evangelio y á los trabajos
 CAR 373 UAR
del apostolado. Sin embargo, ciertos críticos han afir goras y de Platon, Ciceron y Sócrates todos convienen
inado con una entera confianza, que Jesucristo no im en este punto. Todo el mundo sabe las prerogativas
puso á nadie la obligacion de la continencia, ni aun á que los romanos concedian á las veslales. No es, pues,
los apóstoles. Barbeyrac, Tratado de la moral de los de admirar que los fundadores del cristianismo hayan
Padres, c. 8, S. y sig. rectificado y consagrado esta misma idea. Apesar de
S. Pablo dice á los fieles: «No es un mandato el la alla sabiduria de que se glorían nuestros políticos
que os doi, sino un consejo; quisiera que vosotros modernos, presumimos que la opinion de los antiguos
fueseis todos como yo; mas cada uno recibe de Dios el estaria mejor fundada que la suya.
don , que le conviene. Yo digo, pues, á los que están En tercer lugar convienen en que el espíritu y el
en el celibato ó en la viudez, que les conviene per deseo de la lglesia han sido siempre que sus princi
manecer como yo. Si no pueden guardar la continen— pales ministros viviesen en la continencia, y que siem
cia, que se casen; esto vale mas que abrasarse con pre ha trabajado para establecerlo como ley. Con
un fuego impuro», l. Cor., c. 7, y 6. Empezó por efecto el concilio de Neocesarea, celebrado en 315,
establecer como máxima que es bueno al hombre el diez años antes del de Nicea, manda deponer al sacer
no tocará una muger. Ibid., y . 1. Para tergiversar el dole que se casase despues de ordenado. El de An
sentido de este pasaje dice Barbeyrac que S. Pablo cyra dos años antes, no permitió casarse mas que dos
habla de esta suerte, en razon á las persecuciones y diáconos que habian protestado contra la obligacion
no para todas las épocas; pero el lesto mismo refuta del celibato al recibir las órdenes.
esta esplicacion. La razon que da S. Pablo es que el El canon 26 de los apóstoles no permitia mas que
que está casado se ocupa en las cosas de este mundo á los lectores y cantores el tomar esposas. Segun So—
y del cuidado de agradar á su esposa; al paso que el crates, l. 1.", c. 11, y Sozomeno, l. 1, c. 23, esta era
que vive en el celibato no tiene otro cuidado más que la antigua tradicion de la Iglesia, á la cual creyó opor
servirá Dios y agradarle. Ibid. y.32. Esta razones tuno adherirse al concilio de Nicea, observándose
seguramente para todas las épocas. Exhorta á Timo tambien en el dia en las diferentes sectas orientales.
teo á que se conserve casto. I. Tim., c. 5, y. 22. En Convenimos en que estos concilios no obligaron á
tre las cualidades de un obispo, exige que no tenga los obispos, sacerdotes y diáconos á abandonar las
mas que una muger, y que sea continente. Tit., c. 1, esposas que tomaron antes de ordenarse; mas lampo
y. 8. Por continencia jamás entendió S. Pablo el usó co puede citarse ningun ejemplo de que se les haya
Inoderado del matrimonio, sino la abstinencia absolu permitido casarse despues de su ordenacion, ni de vi
ta: esto aparece claro del primer pasaje que acabamos vir conyugalmente con las mujeres con quienes se
de citar. habian casado antes. S. Gerónimo, adv. Vigilant.
Conviene Mosheim en que desde el origen del cris página 281, y S. Epifanio, har. 59, n. , atestiguan
tianismo las palabras de Jesucristo y las de S. Pablo que los cánones lo prohibian. -

se han tomado al pie de la letra, y que esto fue lo que Pueden probar nuestros adversarios que S. Geró -
inspiró á los primeros cristianos anta estimacion há nimo y S. Epifanio se han engañado? Dodwel, Disert.
cia el celibato: lo prueba con los pasages de Atená Cyprian 3, n. 15, cita el ejemplo de muchos eclesiás
goras y de Tertuliano. Hist. christ., sec. 2, S. 35, ticos que vivian con sus esposas como si fueran her
nola 1.º -

manas. Euseb., l. 1. Demonst evang., c. 9, da por ra

S. Juan presenta delante del trono de Dios una zon de esto que los sacerdotes de la ley nueva estan
multitud de bienaventurados mas elevados en gloria enteramente ocupados en el servicio de Dios y del
que los demás: «Hé aquí, dice, á los que no se han cuidado de educar una familia espiritual.
manchado con las mujeres, son vírgenes, siguen al En occidente es mas antigua la ley del celibato: se
Cordero á todas partes: estas son las primicias de encuentra en el canon treinta y tres del concilio de
aquellos que han rescatado á Dios de entre los hom Elvira, que se cree haber sido celebrado el año 300.
bres». Apoc., c. 1, y ... Y todavia se alreven á de Fue ¿ por el papa Siricio el año 385, por
cir que la Escritura no asocia ninguna idea de santi Inocencio I en 0, por el concilio de Toledo el año 100,
dad ó de perfeccion á la continencia. Barbeyrac, ibid. or los de Cartago, Orange, Arlés, Tours, Agda, Or
En vano algunos incrédulos han deducido de esto eans, etc., y por las capitulares de nuestros reyes.
que el cristianismo envileció el matrimonio y ahuyen Esta ley no es mas que de disciplina; qué importa?
la á los hombres de él; por el contrario, Jesucristo se funda en las máximas de Jesucristo y de sus após
fué el que le estableció á su santidad y á su dignidad toles, en el voto de la lglesia primiliva, en la santidad
rimitiva. Los apóstoles condenaron á los herejes que de los deberes de un eclesiástico y aun en las razones
e Consideraban como un estado impuro; mas nos re de una sábia política, como lo veremos mas adelante.
presentan la continencia como un estado mas perfec— Qué mas necesita para ser inviolable?
to, por tanto como mas conveniente para los minis Los deberes de un eclesiástico, y principalmente de
tros del Señor. Un estado menos perfecto que otro no un párroco, no se limilan á la oracion ni akrulto de los
es por esto criminal é impuro. altares; debe administrar los sacramentos, y sobre to
Los mismos críticos confiesan en segundo lugar, do la penitencia, instruir con sus discursos y ejemplos
que todos los pueblos antiguos asociaron una idea de asistir á los enfermos. Es el padre de los pobres, de
perfeccion al estado de continencia, y juzgaron que as viudas, de los huérfanos, de los niños abandona—
este estado convenia principalmente á los hombres dos; su rebaño es su familia; es el repartidor de las
consagrados al culto de la Divinidad, judios, egipcios, linosnas, el administrador de los establecimientos de
persas, indios, griegos, trácios, romanos, gacios, caridad, el amparo de todos los desgraciados. Esta
perubianos, venecianos, filósofos, discípulos de Pitá multitud de funciones penosas y difíciles es incompa
TOMO I, 53
 CE, 37 CE.
tible con los cuidados, los obstáculos y disgustos del El lujo que arruina los matrimonios, la corrupcion
estado matrimonial. Un sacerdote que estuviera liga de costumbres que introduce en ellos los sinsabores
do con este lazo no podria conciliarse el grado de res y la ignominia, el austo, la ociosidad, las pretensio
peto y confianza necesaria para el buen éxito de su nes de las mugeres, las preocupaciones de familia que
ministerio; estamos convencido de esto por la conduc— impiden las alianzas desiguales, la multitud de criados
la de los griegos respecto de sus papas casados, y de y de artesanos cuya subsistencia es incierta, el liber
los protestantes respecto de sus ministros.
- tinaje de los hijos que hace temible la paternidad, la
La Iglesia no obliga á nadie á entrar en el estado irreligion y el egoismo que no quieren sufrir ningun
eclesiástico; por el contrario exige pruebas y toma to yugo, etc., hé aquí los desórdenes que en todos tiem—
das las precauciones posibles para asegurarse de la bos han despoblado el universo, á los cuales es preciso
vocacion y de la virtud de los que aspiran á él; los nacer la guerra antes de tocar á lo que la religion es
que contraen este empeño sagrado lo hacen por elec tableció tan sábiamente.
cion y con todo conocimiento, y en una edad en que 3." . Los políticos que han declamado contra el ma
el hombre puede conocer sus uerzas y su tempera trimonio de los soldados, dicen que el estado se sobre
mento, mucho tiempo despues de la época en que es cargaria con viudas é hijos que quedarian en la mi
habil para contraer matrimonio. Si hay vocaciones seria; lo seria mas con las viudas é hijos de los ecle—
falsas provienen de la avaricia y de la ambicion de los siásticos. La mayor parte de las parroquias del campo
seglares y no de la disciplina eclesiástica. apenas pueden mantener un solo cura, y se las quie—
Para quién es penosa la continencia? Para los que re cargar con la subsistencia de una familia entera.
no siempre han sido castos, para aquellos que inicio Los padres que tienen cierto número de hijos convie—
na la depravacion actual de las costumbres públicas. nen en que sin el recurso del estado eclesiástico y re
Q.ítese la causa, y la virtud volverá á adquirir todos ligioso no sabrian como colocarlos y se los quiere
sus derechos. Cuando se originan escándalos, no pro. quitar este apoyo.
vienen por cierto de los obreros oprimidos con el peso Otras muchas reflexiones habria que hacer acerca
de las funciones eclesiásticas, siño de los intrusos á de las disertaciones políticas de los detractores del ce
quienes el interés y la ambicion de las familias hacen libato; mas adelante nos ocuparemos de esto.
entrar en la Iglesia apesarde ella. Un teólogo inglés, ¿ Warthon, que ha tra
Se nos opone el interés político de la sociedad, las tado esta cuestion, ha querido probar, 1.° que el celi
ventajas que resultarian del matrimonio de los cléri bato del clero no fue instituidó ni por Jesucristo, ni
gos, principalmente para el aumento de poblacion. por los apóstoles; 2.º que nada tiene de escelente en
Esta discusion no deberia ocuparnos; mas nó obstante, sí, ni procura ninguna ventaja á la lglesia ni á la re
daremos algunas razones que estan en su lugar. ligion cristiana; 3." que la ley que le impone al clero
1." Es falso, suponiendo circunstancias iguales, es injusta y contraria á la ¿ Dios; ..º que nunca
que la poblacion sea mas numerosa en los paises en fue prescrito ni practicado universalmente en la an
que está proscrito el ceibato. La Italia, apesar del tigua Iglesia. He aquí unas pretensiones grandes; se
número de eclesiásticos y de religiosos, está mas po— apoya en algo el autor para establecerlas?
blada que lo estaba bajo el gobierno de los romanos; Acerca del primer punto, hemos citado las palabras
se puede probar no solo por un pasaje de S. Ambrosio, de Jesucristo y de los apóstoles, que prueban la es
que ya lo aseguraba en su tiempo, sino por Plinio el timacion en que tenian á la continencia, la preferencia
naturalista que confesaba que sin las clases de prisio que le daban sobre el estado del matrimonio, la dis
nes que encerraban los esclavos, una parte de la posicion en que debe estar un ministro del Evangelio
Italia se encontraria desierta. Si en el dia se encuen para renunciar á todo con el objeto de entregarse
tran algunas partes despobladas, lo estan por la tira complelamente á sus funciones. No prescribieron el
nia del gobierno feudal, y no por la influencia del ce— celibato por medio de una ley espresa y terminante
libato religioso. Cuando la Suecia era católica, estaba no hubiera podido practicaise entonces. Para
mas poblada que lo está desde que se hizo protestante. as funciones apostólicas eran precisos hombres de
Los cantones católicos de Alemania tienen en propor edad madura; se encontraban pocos que no estuvie
cion tantos habitantes como los paises protestantes. ran casados. Mas ellos atestiguaron suficientemente
Lo mismo sucede con los cantones de la Suiza y de la que en iguales circunstancias los celibatarios serian
Irlanda, en comparacion de los de lnglaterra. Se dice preferidos. Es mas facil renunciar al matrimonio que
que la Francia estaba mas poblada hace dos siglos que el abandonar una esposa y una familia, como exige
lo está en el dia, no creemos nada de esto; no obstan Jesucristo. La Iglesia lo ha comprendido, y se ha con
te entonces habia mayor número de elesiásticos y re formado con la intencion de su divino Maestro, en el
ligiosos que en nuestra época. momento que pudo hacerlo.
2." Es un absurdo el atribuir el mal á una causa Warthon dice que el celibato del clero trae su ori
inocente cuando hay otras que son odiosas y á las cua gen del celo inmoderado que por la virginidad reinaba
les es preciso culpar. En las grandes ciudades se cuen en la antigua Iglesia; que esta estimacion no era ni
tan mas celibatarios voluptuosos y libertinos que sa razonable, ni universal, ni justa, ni sensata. No obs
cerdotes y religiosos, y el número de prostitutas esce tante, se fundaba en las lecciones de Jesucristo y de los
de en mucho al de las religiosas: ¿es preciso ser in apóstoles: la prevencion de los protestantes contra la
dulgentes con el vicio para desterrar la virtud? En los virginidad y el celibato es la queño parece ni razonable
campos la falta de subsistencia aleja del matrimonio á ni sensala: proviene de un fondo de corrupcion y epi
ambos sexos; no es, pues, el celibato de ios sacerdo cureismo que es enteramente opuesto al cristianismo.
tes el que debe culparse. Emprende la tarea de probar, con S. Clemeute de
-
 - vº CEI.
CEL 373
Alejandria, que muchos apostoles fueron casados. Es cramentos, el oficio divino cotidiano, etc., havan
te Padre, disputando contra los herejes que condena— estimado conveniente tener ministros casados; sabido
ban el matrimonio, dice: «Condenaron á los apósto es cómo han conseguido hacer de ellos misioneros y
les? Pedro y Felipe tuvieron hijos, y este último casó á San los. -

sus hijas. Pablo, en una de sus espístolas, no tiene la Sobre el tercer punto, Warthon no ha probado,
menor dificultad en hablar de su esposa; no la llevaba segun su promesa, que la ley del celibato impuesta
consigo porque no tenia mucha necesidad de servi á los clérigos es injusta y contraria á la ley de Dios;
cios; dice en esta carta : No tenemos el poder de lle podria parecer injusta, si la Iglesia obligara á algu
var con nosotros una muger, nuestra hermana, co no á entrar en el estado eclesiástico y á encargarse
mo hacen los demas apóstoles?.... Mas como ponian del santo ministerio. Aun cuando un i. casado
toda su atencion en la predicacion, ministerio que no tuviese por otra parte todas las luces, talentos y vir
quiere distraccion, llevaban a estas mugeres, no como tudes necesarias para ser un escelente eclesiástico,
sus esposas, sino como hermanas, á fin de que pudiesen obligándole la Iglesia á que entrara en este santo mi—
entrar sin vituperio y sin la menor sospecha en los nisterio: no creeria deber llevar el rigor hasta separar
departamentos de las mugeres , é introducir en ellos le de su esposa ; esta muger hubiera tenido el dere—
la doctrina del Señor». Strom. l. 3, c. 6, p. 535, edic cho de alegar la sentencia de Jesucristo; que el hom—
cion de Potter. Warthon suprime estas últimas pala— bre no separe lo que Dios ha unido. Mät., capítu
bras, y ha truncado la mitad del pasaje. lo 19, y, 6.
Hemos probado por el mismo S. Pablo que no es Durante las persecuciones de los tres primeros si
taba casado. El Felipe que tenia dos hijas era uno de glos, los sacerdotes eran los principales objetos del
los siete diáconos, y no el apóstol S. Felipe. Estas dos ódio de los paganos; se veian obligados á tomar pre
equivocaciones de S. Clemente de Alejandria fueron cauciones para no ser conocidos y vivir en lo esterior
notadas por los antiguos y los modernos. Véanse las como los seglares: no hubiera sido prudente el impo—
notas de los críticos sobre este pasaje de Stromates, y nerles entonces la ley del celibuto, ni obligarlos á
sobre Eusebio, Hist. ecles., l. 3. c. 30 y 31. Resulta abandonar sus esposas.
del mismo pasaje de S. Clemente de Alejandria que los Mas no citarán un solo ejemplo de obispos, ni sa
apóstoles no vivian conyugalmente con estas preten cerdoles que despues de su ordenacion continuasen
didas esposas. S. Pedro es, pues, el único cuyo ma viviendo conyugalmente con sus esposas, y tuviesen
trimonio es incontestable; mas lo habia contraido an hijos. Los protestantes han tratado de revolver todos
tes de su vocacion al apostolado, y él mismo dijo á los monumentos de la antigüedad para encontrarlos;
Jesucristo: «Todo lo hemos abandonado por segui el de Sinesio, que citan como un triunfo, está en con—
ros». Mat., c. 19, y . 27. tra de ellos. Este santo personaje, para evitar el epis
En el siglo III, todo, el mundo estaba en la persua copado, protestaba que no queria abandonar á su es
sion de que los apóstoles no estaban casados, que la posa, ni sus opiniones filosólicas; no se le dejó de or
secta de los apostólicos renunciaba al matrimonio á fin denar. -

de imitar á los apóstoles. «Yo no quiero, decia, ni separarme de mi esposa;

Acerca del segundo punto, no es suficiente probar, ni irla á ver en secreto, y deshonrar un amor legíti
como hace Warthon, que el uso cristiano del matri mo por las vias que no convienen sino á los adúlteros.
monio no tiene nada en sí de impuro ni indecente, es— Este mismo hecho prueba que los obispos no vivian
ta es la doctrina terminante de S. Pablo; es preciso conyugalmente con sus esposas despues de su ordena
tambien demostrar contra el Evangelio y contra San cion. Evagre. Hist. Eccles., l. 1.º, c. 15. Beausobre
Pablo mismo, que la continencia no es un estado mas que sintió la fuerza de esta consecuencia, dice que era
perfecto y agradable á Dios, cuando se acepta para una disciplina particular á la diócesis de Alejandria;
servir mejor á Dios. Encierra en sí el mérito de do pero cómo se prueba esto?
mar una pasion muy imperiosa, y si el nombre de Acerca del cuarto punto alegado por Warthon de
virtud, sinónimo del de fuerza significa algo, la con nada sirve el citar un gran número de obispos casados
tinencia es ciertamente una virtud. y que tenian hijos, á menos que no se haga ver que
El libro del Ecod., c. 19, y . 15, y S. Pablo I. Cor. los tuvieron despues de su episcopado, y no antes.
c. 7, y.5, asocian una idea de santidad y de mérito Esto es lo que no prueban los enemigos del celibato
á la continencia pasajera: cómo podrá ser menos lau eclesiástico. Cilan el ejemplo del padre de S. Gregorio
dable la que dura siempre? -
Nacianceno; ilustraremos este hecho en el artículo de
El celibato de los eclesiásticos procura á la Iglesia este san lo doctor.
y á la religion cristiana una ventaja muy positiva, Sócrates, lib. 1 , c. 11 , y Sozomeno, lib. 1, c. 24,
que es el tener ministros entregados únicamente á refieren que en el concilio general de Nicea, los
las funciones santas desu estado y á los deberes de ca obispos estaban convencidos en prohibir por una ley
ridad, ministros tan libres como los apóstoles, siem espresa, á los obispos, á los sacerdotes y á los diá
re prontos á llevar como ellos la luz del Evangelio á conos que se hubiesen casado antes de su ordenacion
os confines del mundo. Los hombres en el estado del el habitar conyugalmente con sus esposas: que el
matrimonio no se consagran á asistir á los enfermos, obispo Paphnucio, aunque celibatario y de una cas
socorrer á los pobres, á educar é instruir á los ni-- tidad reconocida, se opuso á ello, que insistió sobre
ños, etc. Lo mismo sucede con las mugeres: esta glo la santidad del matrimonio, sobre el rigor de la ley
ria está reservada á los celibatarios de la Iglesia ca propuesta, y sobre los inconvenientes que, de ello
tólica. No debe admirarnos que los protestantes, des resultarian; que por sus representaciones, los PP.
pues de haber quitado el santo sacrificio, cinco sa del concilio juzgaron que era preciso atenerse á la an
 CEL 376) CEL

tigua tradicion de la Iglesia, segun, la cual estaba ria á la ley de Dios, no seria menos injusto el impedir
prohibido por los obispos, á los sacerdotes y á los diá á los clérigos el casarse despues de su ordenacion lo
conos el casarse, una vez ordenados. mismo que antes. No obstante vemos por todos lo mo
Para comprender la sabiduria de las reflexiones de numentos eclesiásticos que ni en Oriente ni en Occi—
Paphnucio y de la conducta del concilio de Nicea, es dente jamás tuvieron esta libertad. Qué ventaja pue—
necesario saber que durante los tres primeros siglos den sacar estos críticos imprudentes de la antiguo
de la Iglesia hubo muchas sectas de hereges que con disciplina y de la prudencia con que se condujeron los
denaban el matrimonio y la procreacion de los hijos PP. de Nicea? Eusebio, que asistió á este concilio,
como un crimen. Ademas de aquellos de que habla dice que los sacerdotes de la antigua ley vivian en el
S. Pablo, I. Tim., c. , y. 3, eran de este número estado conyugal y deseaban tener hijos, al paso que
los docetas, los marcionilas, los encratitas y los ma los sacerdotes de la ley nueva se abstienen de él, por—
niqueos. Bajo el imperio de Galiano, que murió el que estan enteramente ocupados en servirá Dios y en
año 268, muchos obispos fueron condenados á muer educar una familia espiritual. Demostracion Evangé
to como maniqueos, porque se suponia que guarda lica, l. 1.º, c. 9.
ban el celibato, fundándose en el principio de estos Tambien la ley del celibato para los obispos, sacer
hereges. Renaudot, IIist. Patriarch, Aleacand, p. 17. dotes y diáconos, despues de su ordenacion, conti
Si la ley propuesta en el concilio de Nicea hubiera te nuó siendo observada por los jacobitas y nestorianos
nido lugar, hubiera podido favorecer á estos secla despues de su cisma. Fue interrumpida entre estos úl
rios, y no habrian dejado de prevalecerse de ello: limos el año 85 y en 196; pero restablecida por uno
Paphnucio tenia , pues, razon en insistir sobre la de sus patriarcas el año 5 Assemani, Biblioteca
santidad del matrimonio y la inocencia del comercio Oriental, t. , c. y 1, p. 857.
conyugal, y los obispos no hicieron mal en tener pre En 1549, el parlamento de Inglaterra, aunque re
sente estas circunstancias; por esta razon el canon 3 formador, fue mas razonable que los escritores mo
de los apóstoles condena á los eclesiásticos que se abs— dernos de esta nacion: en la misma ley que dió per
tienen del matrimonio por odio á la procreacion. mitiendo el matrimonio á los eclesiásticos, dice: «Que
A pesar de estos ¿ Beausobre afirma que los convenia mas á los sacerdotes y á los ministros de la
PP. de la Iglesia cifraban su estimacion hácia el celi Iglesia el vivir castos y sin casarse, y que seria de
bato en los errores de los docetas, encralitas, mar desear que ellos mismos se abtuviesen de este esta
cionitas y maniqueos; mas por una contradiccion do». D. Hume. Historia de la casa de Tudor, t. 3, p. 204.
grosera, confiesa que muchos cristianos dieron en es Un nuevo disertador acaba tambien de promover
tefanatismo desde el principio, y por consiguiente an esta cuestion en un follelo titulado Los inconvenientes
tes del origen de las heregias de que hablamos. Hist. del celibato de los sacerdotes, impreso en Ginebra en
del Maniq., l. 2, c. 6, S. 2 y 7, prueba segura de 1781, ha recopilado todos los sofismas, vituperios é
que habian bebido este pretendido fanatismo en las imposturas de los protestantes sobre este ¿ ; no
lecciones de Jesucristo y de los apóstoles. Con efecto, ha añadido mas que algunos pasajes que ha falsifica
confiesa tambien Beausobre en otra parte, que pro do, otros que ha forjado citando autores desconocidos
venia de una idea falsa del bien y de lo mejor, de lo y ¿ impúdicas copiadas de nuestros filó
que habla S. Pablo. Cor. c. 7, Ibid., lib. 6, c. , sofos epicúreos; solo haremos mencion de los mas ab—
S. 12. Mosheim, mas juicioso, hace la misma confe surdos.
sion , Hist. Chris. saec., S.65, nota, prueba la rea El autor. 1.° parte, c. 2, dice, que el celibato pue
lidad del hecho con el testimonio de Atenágoras y Ter de perjudicar á la salud y abreviar la vida; exagera
tuliano no se atreve á vituperar esta estimacion hácia la gran dificultal de guardar continencia. Si esta vir
el celibato tan antiguo como el cristianismo. tud es tan penosa y tan asoladora, está en la huma
Estos mismos hechos prueban que los PP. de Ni nidad de nuestros críticos el permitir el adulterio á las
cea asociaban una idea de perfeccion y santidad al personas casadas que se encuentran separadas por
celibato eclesiástico religioso; que le consideraban co— mucho tiempo, ó cuando una de ellas caiga en un es
mo el estado mas conveniente á los ministros de los tado de enfermedad que le imposibilite llevar una vi
altares, y que hubieran deseado desde aquel mismo da conyugal. Seria tambien necesario permitir la for
momento imponérselo al clero. Efectivamente los in— nicación á los particulares de ambos sexos que no en
convenientes que se seguirian del matrimonio de los cuentran con quien casarse á pesar de los deseos que
eclesiásticos hicieron conocer bien pronto la necesi de ello tienen. Hay menos ancianos entre los celiba
dad de recurrir á él, ó elegir religiosos obligados por tarios eclesiásticos ó religiosos que entre las personas
el voto de continencia para elevarlos al episcopado casadas?
al sacerdocio; y si esta ley no existiera ya hace mil Segun él , el celibato es una señal cierta de la de—
y quinientos años, habria necesidad de establecerla cadencia y de la corrupcion de costumbres. Si se ha—
al momento. Sin eslo se verian renacer los mismos bla del celibato voluptuoso y libertino de los seglares,
desórdenes que acontecieron en el siglo IX y siguien estamos de acuerdo ; mas puede probar que las cos
les: cuando se apoderaron los grandes de los obispa tumbres son mas puras en los parajes en los cuales el
dos, de las abadias y de los curatos, hicieron de ellos clero no observa el celibato? Cuando dice: Multiplicad
un patrimonio para sus hijos; deshonraron la Iglesia los matrimonios y las costumbres serán mejores, debia
con los vicios de los intrusos, y aniquilaron última cambiar la frase y decir: Purificad las costumbres y
mente al clero secular con sus rapiñas. se multiplicarán los matrimonios, sin que haya 10.-
Si fuera cierto, como dicen nuestros adversarios, cesidad de cambiar el estado de los eclesiásticos ni de
que la ley del celibato es injusta en sí misma y contra los religiosos, c. 3 y .
 CEL 377 CEL
A ejemplo de los protestantes sostiene, c. 8, que continentes, que se casen; es mejor casarse que abra
las palabras de Dios dirigidas á nuestros primeros pa sarse con un fuego impuro». Nuestro crítico, fiel
dres, creced y multiplicaos, poblad la tierra, encier discípulo de los protestantes, dice, c. 3, que S. Pa—
ran una ley. No obstante, el testo depone que es una blo habla de esta suerte á causa de las persecuciones:
hendicion y no una ley. Aun cuando lo hubiese sido falso comentario: el apóstol, añade, da este conse—
para los primeros hombres, no puede tener lugar des jo porque los que no están casados se ocupan del ser
pues que se ha poblado el mundo. Se sostendrá que vicio de Dios y de los medios de agradarle, al paso
iodo hombre que no se casa peca contra la ley de Dios? que los que estan se ocupan de los negocios de es—
Se dice que si el celibato se hiciera general pereceria te mundo, y 32. Despues nuestro crítico dice que
el género humano. Nosotros respondemos que si el S. Pablo habla solo de los viudos y los exhorta á
matrimonio fuera general la tierra no podria alimen no contraer segundas nupcias. Nueva falsedad ; el
tará sus habitantes; la poblacion no consiste en dar Apóstol se esplica con claridad: Yo digo á los viudos
hombres al mundo sino en hacerlos subsistir. y á los que no están casados: Dico autem non nup
En la 2.° parte, c. 2, nuestro gran crítico preten tis et viduis, y . 8. Habla tambien de las vírgenes,
de que el celibato, lejos de ser alabado y recomen y. 25. Dice que el que casa á su hija hace bien, y el
dado en el Evangelio, se encuentra condenado ter que no la casa hace mejor, y.38. Si fuera una ley
minantemente por estas palabras: Que el hombre no y un deber el casarse, como sostienen nuestros ad
separe lo que Dios ha unido. S. Clemente de Alejan versarios, con qué cara hubiera podido San Pablo aten
dria dice que asi lo entendió. Stromat. lib. 1, tar contra ella de una manera tan terminante?
p. 5''. Es una cita falsa. San Clemente solo prueba Mas tenemos que habérnoslas con disputadores fe
por estas palabras que el matrimonio no es un estado cundos en recursos. San Pablo, dicen, era casado, ó
criminal como lo entendian ciertos hereges. Pero una al menos lo habia sido; esta es la opinion de San Ig—
cosa es querer separar á los que Dios ha unido por nacio, en su epístola á los filadelfios; de San Cle
medio del matrimonio y otra el juzgar bueno que los mente de Alejandría, Stromat. lib. 3, c. 6, p. 533; de
que no estan casados continúen viviendo de esta ma Orígenes, in epist. ad Rom, lib. 1.° n. 1; de San Ba—
nera, cuando esto puede ser útil á ellos y á los demás; silio de abdic serm. de Eusebio, Hist. ecclesiast. lib.
San Pablo mismo hace esta distincion. 3, c. 30; y de otros muchos PP. S. Pablo mismo lo
Despues de haber censurado á todos los comenta— atestigua bastante en su carta á los filipenses, c. ,
dores del Evangelio, se erige este mismo escritor y. 3. Luego solo ¿ disuadir á los fieles de que
en intérprete de las palabras del Salvador. Mat., c. 19, contrajesen segundas nupcias, y tambien este conse
y. 12. «Hay eunucos que han renunciado al matri jo es contrario al que da á las jóvenes viudas, I. Tim.
monio por el reino de los cielos; el que pueda en c. 5, Yo quiero, dice, que se casen.
tenderlo lo entienda». Si estas palabras, dice, signi Si nuestros críticos fueran menos ciegos, verian
fican que esta sentencia es oscura, nada prueban; si que San Pablo, que segun ellos era viudo cuando es
esto quiere decir que es preciso una gracia particular cribia á los Corintios, no podia hablar de su esposa,
para practicar esta máxima, no puede ser una ley; el como si viviera, en su carla á los filipenses, que no se
sentido mas natural de este pasage es que los que se escribió sino cinco ó seis años despues ; mas la pre
encuentran separados por un divorcio harán muy bien vencion les quitó la presencia de ánimo. La mayor
en abstenerse de un segundo matrimonio. arte de las citas que nos oponen son falsas; no se
Este descubrimiento no es feliz. Una prueba de
-

abla del ¿il matrimonio de San Pablo sino

ue la máxima del Salvador no es oscura es que to— en la carta interpolada ó falsificada de San Ignacio
¿ el mundo la entiende muy bien, á escepcion de los á los filadelfios, y no el testo griego auténtico. No es
anticelibatarios que se hacen sordos. Jesucristo da á cierto que Orígenes sea de esta opinion; se dice que
entender que es preciso una gracia y una vocacion segun la opinion de algunos, San Pablo era casado
particular para comprender bien lo que dice; por cuando fué llamado al apostolado; que seqyn otros
consiguiente no es una ley para lodos, sino para aque no lo era. Nada hemos encontrado en S. Basilio de
llos á quienes Dios ha dado esta gracia y vocacion. lo que se le atribuye; San Clemente de Alejandría
Mas despues que el Salvador ha declarado terminan es el único de los PP. que haya creido en el matri
temente que los que se volviesen á casar despues de monio de S. Pablo. Eusebio cita, es verdad, lo que
un divorcio cometerian un adulterio, es un absurdo el dice San Clemente, mas no da ninguna señal de apro
hacerle decir simplemente que los que se divor— bacion; y esta opinion no está fundada mas que sobre
cian haran muy bien en no volverse á casar. Por un pasage mal entendido de S. Pablo.
otra parte es evidente que los que habian renuncia Tambien Trrtuliano, lib. 1.° ad. uror. c. 3; lib.
do al matrimonio por el reino de los cielos eran San de Monogam c. 3, y 8; San Hilario, in ps. 137; San
Juan Bautista y los apóstoles, pues que estos decian á Epifanio, Haer 58; San Ambrosio in erhortat ad vir
su maestro: Señor, hemos abandonado todo por se gines; S. Gerónimo, lib. 1.” contra Jovin. et epist.
guiros 22 ad Eustochium; S. Agustin, lib, de Grat. et lib,
El pasage de S. Pablo, 1 Cor. c. 7, está bien cla Arb. c. 3; lib. de bono “¿ c. 10; lib. 1.° de
T0. ¿ bueno al hombre, dice, no tocar una mu Adult. conjug. c., lib, de Opere, Monach. c. ,
ger.... Deseo que vosotros seais todos como yo; mas afirman unánimamente que San Pablo nunca fue ca
cada uno ha recibido de Dios un don particular, el sado. La opinion particular de S. Clemente de Ale
uno de una manera y el otro de otra. Mas yodigo á los jandrino puede prevalecer sobre esta tradicion
que estan en el celibato ó en la viudez que es bueno constante.
que permanezcan en este estado como yo. Que si no son No hay ninguna oposicion entre los diversos con
 CEL 878) CEL
sejos que dá San Pablo, quiere que se vuelvan á ca Nuestro nuevo disertador, instruido probablemente,
sar las jóvenes viudas, porque asi lo desean, quia por Beasobre, , sostiene que estos antiguos hereges,
nubere volunt, y porque muchas han faltadoá la fe que del ractores del matrimonio, no le condenaban como
habian jurado. I. Timot, c. 5, y 11 y 12. Segura absolutamente nulo y criminal, sino que le conside
mente era mejor para ellas el volverse á casar que el raban como un estado menos perfecto que el celibato,
abrasarse con un fuego impuro. l. Cor. c. 7. y. 9. doctrina que en el dia es la de la Iglesia romana,
Por lo que respecla al pasage de San Pablo, sacado pero que fue condenada por los PP.
de la misma carta á los corintios c. 9, y.5 sobre Felizmente el maestro y discípulo se contradicen y
el cual se engañó á S Clemente, y en el que insis refutan cada uno por su parte. El primero, despues
ten nuestros adversarios, no presenta la menor difi— de haber hecho todos sus esfuerzos para probar que
cultad. «Tenemos, dice el Apóstol, el poder de lle— los maniqueos no pensaban respecto del matrimo
var con nosolros una muger, como nuestra her nio de otra suerte que los PP., se ve obligado á con
mana, como hacen los demas apóstoles y los her— venir en que estos hereges no podian, segun sus
manos del Señor y Cefas»? S. Clemente, dicen estos principios, ni aprobar el matrimonio, ni considerarle
críticos, bajo el nombre de muger, comprendió una como una institucion santa, porque enseñaban que
esposa; esta traducciones defectuosa. Nuestros críti el demonio ó el mal principio es el que ha construido
cos, atacados siempre del mismo vértigo, quieren que el ¿ humano, y se ha propuesto perpetuar cuan
S. Pablo, despues de haber hablado como viudo en el lo pueda por la propagacion la cautividad de las
capítulo 7, haga mencion de su esposa en él? almas: este era tambien el error de muchas sectas de
Segun su costumbre ordinaria, cuando un Padre gnosticos. Hist. del Maniqueismo l. 7, c. 3, S 13;
de la Iglesia dice alguna cosa que le es favorable, ha— c. 5, S. 9. El segundo no ha podido menos de
cen de él un elogio pomposo, deprimiendo y hablan— confesar que los encralitas y, apostólicos rechaza
do con desprecio de todos los que no son de su ban el matrimonio como absolutamente malo, que
opinion. Eustales de Sebaste, en Armenia, fue condenado en
A fuerza de especulaciones, han adivinado el ori el concilio de Gangres, hácia el año 21, porque
gen de la estimacion en que se tenia desde los pri prohibia el cohabilar á los casados. Inconv. del celi
meros siglos la virginidad y el celibato: provino, di bato, 2.º part. c. 9, 10, y 13. Hé aquí lo que los
cen, de la creencia en que estaban los primeros cris PP. y la lglesia romana jamás enseñaron, antes
tianos que el mundo concluiria muy pronto, de la por el contrario, siempre lo proscribieron y censu
Ta'01,
melancolía que inspira el clima del Egipto y de las -

Indias, de las ideas quiméricas de perfeccion sacadas
de la filosofía de Pitágoras y de Platon, y esta supers.
ticion se estendió á todas partes.
Hénos aquí reducidos á creer que Jesucristo y sus
discípulos, S. Pablo y el autor del Apocalipsis, que
hicieron estimacion de la virginidad y de celibato,
estaban persuadidos del fin próximo del mundo, que
estaban preocupados con las ideas de Pitágoras y
Platon. En el artículo MUNDo demostraremos que no
es cierto que predijeran su fin próximo.
, Quién no admirará la pertinacia de nuestros adver
sarios? Dicen que el estimar la virginidad y el celiba
to es un absurdo injurioso á la naturaleza, contrario
á los designios del Criador, á los intereses de la hu—
manidad, á las luces mas puras del buen sentido y por
un contagio deplorable esta supersticion se ha es—
parcido por todas partes: ha pasado del Egipto á las
lndias y á la China, ha infeclado á los ignorantes y
á los filósofos. Con el cristianismo, penetró en Italia
y en las Galias, en Inglaterra y en los climas hela
dos del Norte; fué hasta Perú para establecer las
vírgenes del sol. Por lo menos se lisongean, por la
superioridad de sus luces, de curar por último el uni
verso entero de esta enfermedad, y de darle el buen
sentido que ellos creen poseer esclusivamente. Di
cen, que esta estimacion ciega por la continencia fue
llevada al esceso por los PP. de la Iglesia, y se es—
fuerzan en probar que los PP. jamás han pensado
en establecerlo como ley al clero. Dicen que los
PP. despreciaron tanto el estado del matrimonio co
mo los docetas, los marcionistas y los maniqueos; y
apenas aparecieron estos hereges cuando fueron re
futados y condenados por los PP.
Mas este es un hecho cuya discusion es importante. religioso seria una mala política, una puerilidad in
No seguiremos á este autor en sus declamaciones
contra los votos, contra el estado monástico, contra
los conventos de religiosas y contra las supersticio
nes llevadas al Norte por los misioneros en el siglo IX
y siguientes; estas invectivas copiadas de los protes
lantes y rebatidas por los incrédulos, serán refuta
das cada una en su lugar. En cuanto á las costumbres
del clero en los siglos desgraciados, y á los escándalos
que afligieron á la Iglesia, estos desórdenes no tu
vieron lugar sino despues de la caida de la casa de
Carlomagno, y despues de la revolucion que trastor
nó los gobiernos en nuestros paises. Los señores,
siempre armados, se apoderaron de los beneficios,
hicieron dc ellos su patrimonio y colocaron allí á sus
hijos y protejidos; estos intrusos no podian dejar de
tener lodos los vicios de sus patronos: la simonía y
el concubinato iban á la par: Mosheim y otros pro
testantes lo conocen tambien como nosotros. En ge
neral quiénes son los prelados que mas deshonraron
la Iglesia? Los que ¿ tenido hijos legítimos an
tes de su ordenacion, ó los que tuvieron hijos natu
rales? Es preciso renovar en el dia los desórdenes que
causaron? Es falso que el matrimonio permitido á
los ministros de la religion en los paises del Norte,
haya mejorado las costumbres ; Bayle ha probado lo
contrario. Dicc crit. Hermitaño, rem. 1, S. 3. .
Para no dejar nada que desear sobre esta cuestion
tan rebatida, nos resta examinar si el cambio de dis
ciplina sobre este punto produciria efectos tan venta
josos como dicen.
En los Anales politicos de 1782, n. 21, hay una
carta cuyo autor se propone demostrar, por medio del
cálculo, que la supresion del celibato eclesiástico y
 CEL 379 CEL

digna de la atencion de un gran legislador, y una in Doscientos cincuenta mil soldados ó marineros son
novacion sin resultados para la poblacion. arrebatados á la poblacion, y se eligen los indivi
El odio, dice, los celos, la credulidad, el entusias duos mas capaces para el servicio civil. La corrup
mo reformados, la rivalidad de los filósofos con el cion, las enfermedades vergonzosas emponzoñan s
clero, han ecsagerado hasta el rídiculo el número de ejércitos mientras que la desercion los disminuye.
eclesiásticos y religiosos; hé aquí el resultado de las Contad los mendigos, los empleados en las quintas,
estadísticas mas esaclas. los venteros, los jornaleros, la nube de literatos,
Sobre trece millones de habitantes cuenta la Es— principalmente los filósofos, el espíritu filosófico que
paña y solo ciento sesenta mil celibatarios religio no es mas que el espiritu del egoismo que fue siem
sos, de los cuales una tercera parte pertenecen al re antipático al matrimonio; ved nuestras costum
clero secular. Es un uno y medio por ciento de toda ¿ nuestras capitales, nuestras habitaciones; ob—
la generacion. En Italia hay catorce millones y me servad el lujo en sus progresos gigantescos, lo im
dio de habitantes y doscientos ochenta mil eclesiásti posible de contener el concubinato, el poder marital
cos; es un dos por ciento de la totalidad de los ha— y paternal de dia en dia mas relajado y mas inso
bitantes: mas de la mitad de ellos se encuentran en portable, el tono y la conducta de las mugeres; y li
el reino de Nápoles y en los estados del Papa; el res sonjeros despues de que la propagacion de la especie
to de la Italia no supone mas que un setenta y cinco ya á cubrir la tierra cuando cincuenta mil religiosos
de individuos dedicados á la religion. hayan renunciado al voto del celibato.
Es preciso notar que en llalia hay pocas ciudades Hay en el reino dos tantos mas de prostitutas que
grandesqueabsorven la poblacion: no sostiene ejércitos de religiosas: cuáles son mas funestas á la pobla
ni marina militar: un clima suave y un suelo fertil, dis— cion? Desde 1766 á 1775, el número de niños es
minuyendo las necesidades, aumentan la subsistencia. pósitos se ha aumentado en Paris una tercera parte.
Los últimos cálculos hechos bajo la administracion La nobleza de las ciudades produce pocos matri
de M. Necker han dado de poblacion á Francia vein monios y menos hijos todavía, nuestras leyes y nues
te y tres millones quinientos mil habitantes; supo— tros usos han condenado á los segundos de las casas á
niendo de estos doscientos mil celibatarios religiosos, la indigencia y al celibato: los monasterios ó las Or—
segun los cálculos mas ecsagerados, es menos de la denes son, pues, un recurso para la nobleza de ambos
centésima parte de la nacion. sexos; acogen los celibatarios producidos por el des
Hay mas, sobre el total de seis millones y mas de orden de la sociedad, mas no los engendran.
doscientas mil mugeres aplas para el matrimonio, hay Valdria mas reducir nuestro estado militar, despe
un millon y cuarenta mil que no están casadas, no dir la mitad de las gentes de librea al campo, tener
contando entre ellas mas que setenta mil religiosas, dos terceras partes menos de abogados, procuradores
ó la quincena parte de las mugeres celibatarias. Del financieros, ugieres, autores, etc. y conservar los re
total de los hombres pueden contarse por lo menos un ligiosos.
millon que podrian casarse y que no lo están; de este Esto es impracticable, sin duda alguna, y este es
millon solo se cuentan prócsimamente ciento treinta el tema de todos los mas bellos planes de reforma que
mil eclesiásticos ó religiosos, ó lo que es lo mismo, la se nos presentan en los libros y se ensalzan en las no
décima parte. ticias públicas. Acariciamos nuestros vicios, é indi
Volved al mundo, continúa el autor, todos los camos su remedio. Se declama contra el lujo, cuando
hombres encerrados en los monasterios, serian seten el lujo no puede reprimirse; se diserta, sobre la eru
la mil celibatarios por lo menos sobre nn millon. Pero cacion cuando el abuso de la sociedad borra mas y
no todos tendrán las facultades, la inclinacion, la mas sus caracteres; se pueblan los estados en los fo
fortuna y vocacion necesarias para el estado conyugal. lletos, sin tener presente la accion irresistible de las
Los segundos de las casas, los ancianos, los enfermos, costumbres y de los usos sobre las verdaderas fuen—
los que prefieren la libertad é independencia del ce tes de la poblacion.
libato al yugo del matrimonio, etc., tambien se han El autor de las investigaciones filosóficas sobre el ce
de separar, y casi componen una mitad. Por lo tanto libato esclama: «Ved los estados protestantes, en
ganareis de un millon de habitantes cerca de trein ellos hormiguean los brazos, y los estados católicos
ta mil individuos, sobre los cuales la muerte, la po— estan desiertos». Otros veinte han hecho la misma
breza y la abstinencia forzada sacarán su tributo: he comparacion.
aquí á qué se reducen las romancescas visiones de En Suiza, el mas poblado de los cantones es el de
los declamadores. Soleura, que es católico, en él hay eclesiásticos, re
Solo la capital encierra mas criados que religiosos ligiosos y religiosas; si Sicilia está llena de ruinas,
hay en todo el reino; el número de estos esclavos del es consecuencia del gobierno feudal, el mas atroz des
lujo en toda la Francia asciende á una duodécima parte tructor que haya inventado la usurpacion. Los Paises
de la poblacion. A los sirvientes les está prohibido el bajos católicos, las ricas repúblicas de Italia, ¿estaban
matrimonio como perjudicial á los intereses de sus despobladas en los siglos quince y diez y seis?
amos, en las mugeres se tolera el libertinage y no la No prosperaban tanto como la Holanda? la Prusia
• fecundidad legítima. El celibato forzado de los criados tiene mas habitantes que el Palatinado y la Suecia
es un foco de desórdenes, el de los eclesiásticos está que la Lombardía? La fertilidad del suelo, la situacion
sujeto en sus inclinaciones por la santidad de su ins topográfica y el gobierno poseen otra fuerza diferen
tituto, por el temor á la deshonra y por el honor del te de los conventos.
cuerpo; un religioso tiene delante de sí diez ejemplos Reformar y no destruir, tal debe ser la mácsima de
de virtud por uno de depravacion. todo hombre que especule en política. Cambiad esos
 CEL 380, CEL
asilos inútiles en hospicios de pobreza para los ancia L0s ¿ del celibato eclesiástico y religioso, no
nos, para el dolor, el arrepentimiento y la abnega han perdonado nada para atacarle, ni las contradic
cion, y la sociedad podria ganar en ello, mas no la ciones ni las imposturas; hé aqui tambien un ejemplo
poblacion. El amor á la paradoja no inspira esta opi TeCiene.
nion; cuando uno se funda en cifras no se le puede En el Diario enciclopédico del 15 de marzo de 1786,
acusar de impostura. ¿ 509, se inserto una carta de Eneas Sylvio, que
Nos parece que este autor no teme el ser refutado; si ué papa, bajo el nombre de Pio II el año 1458, en la
se engaña, está muy en el orden el demostrar su error. cual se dice que justitica el libertinage de su juventud.
El autor del artículo celibato en el Diccionario dey declama contra el celibato de los sacerdotes: es la 15
jurisprudencia ha copiado las diatribas del abate de la coleccion de sus cartas. Mas en el año literario de
Saint-Pierre, puestas en la antigua Enciclopedia, y este mismo año, n. 15, ba probado un sabio: 1.° Que
añadido lo que los protestantes digeron de la de Iver el diarista ha traducido infielmente la carta de Eneas
dum. No podemos menos de poner en claro algunas Sylvio, y que es suyo lo que ha dicho en las dos frases
de las contradicciones de este artículo. mas fuertes contra el celibato de los sacerdotes.
Despues de haber sostenido que el celibato estaba 2."Que esta carta 15fué escrita en lajuventud del autor,
roscripto entre los judios en virtud de la pretendida mucho tiempo antes de que recibiese órdenes sagra
creced y multiplicaos, se nos asegura que Elias, das. 3. Que durante su pontificado desaprobó y re
Eliseo, Daniel y sis tres compañeros, vivieron en lá tractó lo que habia escrito en la efervescencia de las
continencia. Hé aqui, ¿ unos profetas y amigos de pasiones. En su carta 395, dirigida á Cárlos Cipria—
Dios que violaron públicamente la ley de Dios dada no, dice: Despreciad y rechazad ¡oh mortales lo que
desde la creacion. Se nos ensalza mucho las leyes que hemos escrito en nuestra juventud con motivo del amor
los griegos y los romanos habian hecho contra el ce profano; seguid lo que os decimos al presente Creed mas
libato, la especie de infamia con que la señalaron, bien á un viejo que á un jóven, á un pontifice que á un
los privilegios que concedian á las personas casadas; simple particular; á Pio II mas bien que á Eneas Syl
no obstante se nos ha hecho observar que todos los vio..." Flacco Illiryco, apoyado en lo que dicen Pla
pueblos han asociado una idea de santidad y perfec— lino y Sabellico, atribuye fuera de propósito á este
cion á la continencia observada por motivo de reli—
papa la máxima siguiente, á saber: que el matrimo
gion ; no es, pues, cierto que toda clase de celibato nio fue prohibido á los sacerdotes por muy buenas ra
¿ sido notado de infamia. Por una parte, se dice, zones, mas que las ha habido mejores para volver á
ue no hay hombres á quienes el celibato no sea dificil él. Por el contrario, está demostrado que no hay nin
¿ observar, que los celibatarios deben ser tristes y guna para locar á la antigua disciplina, y que toda
melancólicos, por otra se cita una arenga de Metelo clase de razones estan por conservarla. V. ViagINIDAD.
de Numidia dirigida al pueblo romano, en la cual con
fiesa que es una desgracia el no poder pasarse sin mu Celícolas. Adoradores del Cielo ó de los astros,
geres, que la maluraleza ha eslablecido que no se pue hereges que hácia el año 08 fueron condenados por
ca vivir felices con ellas. Para ser feliz seria preciso no rescriptos particulares del emperador Honorio, y co
ser ni casado ni celibatario. Uno de estos oráculos di
locados en el número de los paganos. Como en el có
de que es el cristianismo, la ley del celibato para los digo teodosiano se encuentran bajo el mismo título que
eclesiásticos, que es lan antigua como la Iglesia, que los judios, se cree que por Celícolas se quisº desig
Dies la ha juzgado necesaria para aproximarse mas nar los apóstatas que habian renunclado al cristiar 1s
dignamente á sus altares; otro pretende que el celiba mo para volver al judaismo; pero que no querian ser
to no era mas que de consejo, y que á pesar de lo que considerados como judios porque les parecia odioso
ha pensado de él el concilio de Trento, la cuestion este nombre. No estaban sujetos al pontífice de los ju
que examinamos es puramente política. En la misma dios, ni al sanhedrin, pero tenian superiores que lla
página se lee que en Occidente el celibato estaba pres maban mayores ó ancianos; no se sabe precisamen
cripto á los clérigos, y que era libre en la Iglesia la — te cuáles eran sus errores.
tina; es pues necesario que esta no sea la misma que Es evidente que los paganos llamaron tambien á los
la lglesia de Occidente. judios celícolas; Juvenal dice en ellos: -

Lo que decia el abate Saint-Pierre de que los mi Nihil praeter nubes et corli numen aderant.
nistros protestantes son tan respetados del pueblo co Celso, en Orígenes, lib. 1", n. 26, les vitupera el
mo los sacerdotes católicos, es absolutamsnte falso. adorará los ángeles; lo repite, lib. 5, n. 6, el autor
Es cierto, entre cien ejemplos, que los protestantes de la predicacion de S. Pedro citado por Orígenes,
sensatos, aun los soberanos, han dado mas pruebras l. 13, in Joan..., n. 17, y por S. Clemente de Alejan
de respeto á los sacerdotes católicos, cuyas costum dria, Strom., l. 6, c. 5, formula contra los judios la
bres conveniat á sus propios ministros; por otra parte misma acusacion, y entendieron por ángeles estos au
sabemos que el cleró inferior en Inglaterra es muy tores los génios ó inteligencias de que creían estar
despreciado. Lóndres, l. 2, p. 21. animados los astros. Se prueba este hecho por un pa
o nos detenemos en censurar lo que se dice en este saje de Maimonides. Véase la Nota de Spencer sobre
artículo contra el celibato voluntario ó forzado de los Orig. contra Celso, l. 1, n. 26.
seculares; mas los medios que se proponen para re Es verdad que mas de una vez los judios rindieron
mediarlo son poco menos que impracticables, y los á los astros ó ál ejército de los cielos un culto supersti
que el abate Saint-Pierre soñó para prevenir los in cioso; los profetas se lo han vituperado, IV Reg, ca
convenientes del matrimonio de los eclesiásticos son pítulo 17, y . 16; c. 21, y. 3, 5, etc. Era idolatria mas
absurdos. -

comun entre los orientales.

 r---, CEL 381 CEL

, S. Gerónimo, consultado por Alsagio sobre el pa Véanse CELos. En el profeta Ezequiel, c. 8, y., 3 y 5,
l. saje de S. Pablo á los colosenses, c. 2, y 18, «que el ídolo del celo puede significaró la estátua de Baal
nadie os seduzca afectando humildad por un culto su ó la de Adonis, ó cualquiera otro ídolo, cuyo culto
persticioso de los ángeles», responde que el Apostol escite la indignacion de Dios.
8, quiere hablar del antiguo error de los judios, que los No obstante, en algunos pasages espresa una gran
º profetas habian condenado. Pensaba éste Padre que de afeccion, una adhesion violenta á alguno ó á cual—
el por ángeles enlendia S. Pablo los espíritus motores quiera cosa. Ps, 68, y. 10, David dice á Dios. «El
l, del cielo y de los astros, á los cuales tanto los judios celo de vestra casa me ha devorado». El profeta
aló como los paganos, habian rendido culto. Epist. 151, Elías III, lleg. c. 19, y, 10 y 4: «Yo he sido arreba—
rió. n. 10, Cod. Theod. lib. 12, lit. 6, de Judeis et Caelicolis. tado de celo por el Señor de los ejércitos». Zachar.
c. 1, y. 14: «Yo he sido arebalado de celo por Sion
Er Celitas. Nombre de una congregacion de reli y por Jesusalen.
tºs giosos hospitalarios, que tienen casas en Alemania y En este último sentido es en el que llamamos celo
ds. en los Paises Bajos. Su fundador se llamaba Meccio y de religion la adhesion que tenemos al culto de Dios
l,
por esta razon se conocen en llalia bajo el nombre que nos parece mas verdadero, el deseo que manifes—
l
de mecianos. Siguen la regla de S. Agustin; su insti tamos por estenderle y darle á conocer á nuestros se
¿-
luto fué aprobado por Pio ll, hácia el año 160; mas mejantes, el sentimiento que esperimentamos cuando
e s ecsistian hacia ya mas de un siglo. Se ocupan en cui es desconocido, despreciado y atacado por los in
dará los enfermos, y con especialidad á los que son crédulos. Es evidente que un hombre no puede ser
atacados de enfermedades contagiosas tales como la verdaderamente religioso sin tener celo, porque el
peste; vigilan y sirven á los dementes, entierran los celo en sí no es mas que una ardiente caridad. Es po
muertos, etc. Tienen mucha relacion con los herma sible amar sinceramente á Dios, estar reconocido á
nos de la caridad. la gracia que nos ha hecho de revelarse á nosotros,
.
No se esperó al siglo XVII para fundar por motivo sin desear que todos nuestros semejantes gocen de la
de religion establecimientos útiles á la humanidad. misma felicidad?
4.
es:
Entre un gran número de institutos, los hay que en Este es el sentimiento que Jesucristo quiso inspi
el dia continuan prestando inmensos servicios, y du rarnos cuando nos enseñó á decir todos los dias á
im
rarán mientras se les proteja y favorezca. Dios en nuestra oracion: «Santificado sea tu nombre,
-
Es un rasgo de malignidad de parte de Mosheim el venga á nos tu reino, hágase tu voluntad asi en la
tará tierra como en el cielo». Este deseo no seria sincero,
l
decir que el instituto de los celitas se formó porque
los eclesiásticos del siglo XIV no cuidaban de los en si no estuviéramos dispuestos á contribuir á ello con
toda todas nuestras fuerzas. Dice, Luc. c. 12, y. 9: «Yo
fermos ni de los moribundos; no ha podido probar es—
DAD,
la acusacion con ningun hecho ni monumento. Los he venido á traer un fuego sobre la tierra, y qué
verdaderos motivos de esta institucion fueron los es quiero sino que se encienda?» Este fuego era segura
lº,
tragos enormes de la enfermedad contagiosa que rei mente el celo por la gloria de su Padre y por la sal—
s
nó el año 138 y siguientes, que asoló la Italia, la vacion de los hombres, y lo elevó hasta derramar su
yº España, la Francia, Inglaterra, Alemania y los pai sangre, á fin de procurar lo uno y lo otro, «Ninguno,
t ses del Norte; se llamaba la peste negra, y concedió dice, puede amar mas á sus amigos, que el que dá su
indulgencias Clemente Vl, á todos aquellos que pres— propia vida por ellos». Joan. c. 15, y. 13.
s lasen á los apeslados ausilios espirituales ó tempo— Qué efectos no ha producido este sentimiento su
- rales. Mas en tanto que los celitas les procuraban los blime en el mundo? Doce apóstoles débiles, ignoran
se segundos, ¿quiénes les proporcionaban los primeros tes, límidos, pero inflamados de celo por la gloria de
R sino los sacerdotes y los religiosos? Es como si se su Maestro, se dividieron el universo, y llevaron su
s: dijera que los hermanos de la caridad fueron insti nombre y su doctrina de una á otra eslremidad. Les
tuidos el año 1520 para aliviar los cuerpos, porque habia dicho: Enseñad á todas las naciones. Empren
t los sacerdotes descuidaban las almas. diéronlo y lo llevaron á cabo. En el esº de medio
Mosheim observa que los celitas fueron tambien siglo se establecieron los cimientos de la Iglesia,
llamados Lolardos; mas no se les debe confundir con desde aquella época nada ha podido destruirlos. Des
muchas sectas de hipócritas, que tambien se llamaron pues de haber continuado sus trabajos hasta la muer
asi despues. V. Lola RDos. te, dejaron los apóstoles por sucesion á olros su celo,
¿ y su mision; Jesucristo que les prometió per
SUl

Celo. Esta palabra se toma en muchos sentidos manecer con ellos hasta el fin de los siglos no ha
en la Sagrada Escritura: significa muchas veces la faltado á su palabra; el fuego encendió no se ha
indignacion y la ira. Ps. 78, y.5. David dice á Dios: apagado, subsiste siempre el foco en su Iglesia, y
«Vuestra ira, (zelus) se encenderá como un fuego». sirve para distinguirla de todas las sociedades forma
Núm. c. 25, y. 13. Finées se sintió animado de das sin el ausilio de este divino Salvador.
celo contra los impíos que violaban la ley del Señor. Nada ha perdido el celo de su actividad en la su
Designa tambien los celos: Act. c. 13, y . 5, se cesion de los siglos; los misioneros intrépidos no se
dice que los judios se llenaron de celo ó de celos. Ps. han arredrado ni por la barbarie de los pueblos, ni
36, y. 1, leemos: «No seais, rivales de los criminales por la distancia de los lugares, ni por la diferencia
ni celosos de la prosperidad de los pecadores». Prov. de climas, ni por los peligros del mar, ni por la es -
c. 6, yº. 3", los celos del marido no perdonan el adul travagancia de los idiomas; arrostraron igualmente
terio en su venganza. Sap. c. 1, y, 10, el oido celo los yelos del Norte y los calores del Medio dia, el
so todo lo oye, Dios es llamado el Dios celoso (Zelotes). orgullo de las naciones civilizadas, y la estupidez de
TOMO 1. 5.
 CEL 382 CEL

los salvages. Estos últimos, tan desgraciados como recen permitidas cuando se lrata de la causa de Dios;
corrompidos, y mas semejantes á los brutos que á los no hay crimen que no santifique el celo de religion.
hombres, una vez instruidos, casi cambiaron de na Esta invectiva es demasiado violenta para ser jus
turaleza: la sociedad, la política, las leyes, la edu ta; queriendo pintar á sus adversarios, se han pinta
cacion, la industria, las artes y la abundancia fue do á sí mismos los incrédulos, y prueban que el celo
ron sustituidas entre ellos á la vida puramente ani antirelgioso es mas temible que el celo de religion; á
mal; proporcionándoles el Evangelio un eslado mas poco que comparásemos las causas, síntomas y efe
feliz sobre la tierra, tambien les da esperanzas de tos de estas dos enfermedades, nos convenceriamos
una felicidad eterna despues de su muerte. No han de esto.
sido los filósofos, ni los conquistadores, sino los mi 1.º. Un cristiano celoso no hace mal en creer que
sioneros celosos, los que amansaron sucesivamente es debido al bien general de la sociedad que la pu—
á los moros, libios, eliopes, árabes, persas, partos, reza de la fé y de las costumbres se mantengan en
scilas, sármatas, daneses, normandos, los ¿ y ella, y que todo error é impiedad sean desterrados.
bretones, los germanos y los galos. No fue la filosotia, Cuando trata de contribuirá ello, y desea que todo
sino el Evangelio el que ha domado la ferocidad de los infiel esté en estado de no poder perjudicar, su in
hunos y vándalos, de los godos y burguiñones, de tencion es muy laudable, pues que no se propone
los lombardos y francos. El celo ha sido mas audaz mas que la conservacion del bien que el cristianismo
que la ambicion de los conquistadores, que la avari ha producido en el mundo. Si en sus opiniones en
cia de los comerciantes, que la curiosidad é inquie tra la pasion, el 0dio, la ira y la malignidad,
tud natural de los pueblos : y si los misioneros no si emplea mediosilegitimos para perjudicará alguno,
hubieran empezado por dirigir el rumbo de los na es culpable sin duda alguna; si cree que la pureza
vegantes, acaso la mitad del globo no seria en el dia del motivo puede santificarle, comete un error. Una
conocida por los filósofos. de las máximas del cristianismo es que no se debe ha
Mas qué cúmulo de crímenes, desórdenes y des cer mal con el objeto de que resulte un bien. Rom. c. 3,
gracias no ha hecho desaparecer el cristianismo en y. 8. Mas cuando un ejército de pretendidos filó—
donde ha penetrado? El asesinato de los recien na sofos se ha conjurado contra el cristianismo, ha for
cidos ó prócsimos á nacer , el uso de esponerlos ó jado millares de volúmenes llenos de invectivas, ca
venderlos, el destinar á los jóvenes á la esclavitud, ¿ é imposturas contra esta religion santa y
y á las doncellas á la prostitucion, el hábito de jugar contra sus hijos, ha predicado el deismo, el ateismo,
con la vida de los esclavos, dejarlos morir de ham el materialismo y el pirronismo, qué motivo laudable
bre cuando eran viejos ó achacosos; el despoblar las le ha motivado á ello? qué efecto saludable esperaba
brovincias para multiplicar las víctimas del lujo pú obtener? Este celo infernal no podia dar de sí mas que
blico, la impudicicia mas desenfrenada; los comba el sumir á las naciones en la ignorancia, en la cor
tes de los gladiadores, etc. Estremece el cuadro que rupcion, en el embrutecimiento de donde las ha sacado
presentan las costumbres paganas; nuestra religion el cristianismo. Esto se demuestra por el ejemplo
las ha cambiado y no quedarian de ellas vestigios, de aquellas que, por haber renunciado á esta re
si se conociera mejor y practicara. Mas ya, no nos ligion, han vuelto á caer en la barbarie. Es un
acordamos de lo que eran nuestros padres antes de absurdo el alabar en apariencia el celo de Jesucristo
ser cristianos. El transcurso de los siglos, el hábito y de ós apóstoles, y tratar de destruir todo el bien
de hacer bien, una ignorancia afectada, y una filo que ha producido.
sofia pérfida nos ha hecho ingratos é injustos; 2.º Los medios de que se han valido los incré
No solo los incrédulos no confiesan que el celo por dulos para establecer, si hubiesen podido, la irreli
la religion sea una virtud, sino que dicen que es un gion en toda la Europa son mas honrosos y legítimos
vicio odioso, y uno de los mayores azotes del género ue los que echan en cara á los creyentes animados
humano ; «lantas pasiones se ocultan, dicen, bajo e un falso celo? Cien veces los hemos convencido de
esta máscara, es el origen de tantos males, que se mentira, de impostura, de citas falsas, de traduccio
ria de desear que no se la hubiese colocado entre las nes infieles, de calumnias forjadas contra los perso—
virtudes cristianas. Para una vez que pueda ser lau nages mas respetables de todos los siglos; han em
dable, se la encontrará cien veces criminal, pues leado las invectivas mas fogosas para encender el
que obra con la misma violencia en las religiones analismo, anticristiano en el ánimo del pueblo; se
verdaderas que en las falsas. - han erigido en profetas, anunciando la próxima rui
No obstante, algunos se han dignado convenir en na del imperio de Jesucristo; algunos llevaron la de
que un celo dulce, caritativo, prudente, compasivo, mencia hasta exhortar á los súbditos á que se suble
tal como el de Jesucristo y el de losapóstoles, seria una varan contra los soberanos, y á los esclavos á que
virtud; mas segun su opinion, no ecsiste de esta degollaran á sus señores. Antes de ellos, los predica
suerte en el mundo: los pretendidos celosos, conduci dores del siglo XVI emplearon las mismas armas
dos por el orgullo, por la ambicion de dominar sobre para hacer abrazar la heregía; si los de nuestra época
los ánimos y egercer el imperio de la opinion, se ir no han llevado su celo como los sectarios hasta dego
ritan á la mener contradiccion, mirar como á un im llar á sus enemigos, ha sido mas bien por impotencia
pío á todo el que no piensa como ellos; á sus ojo todo que por moderacion. Todo el mundo sabe que el mas
error es un crimen, toda resistencia á su voluntad es célebre de sus gefes hizo ahorcar en efigie á los que
un atentado. Si dependiera de ellos, esterminarian en habian escrito contra él; estamos muy persuadidos
un solo dia á todos los infieles. La mentira, la impos de que si hubiese estado en su mano, habria sustitui
tura, la calumnia, la injusticia, la crueldad les pa. do la realidad á la representacion.
 CEL 383 CEL
3.° No sabemos si su celo ha llegado hasta san artículo probaremos que nuestros adversarios racioci
tilicar á sus ojos lodos estos escesos; siempre han sos nan tan mal sobre este punto como en los demas. No
tenido que sus motivos eran laudables, sus procedi contentos con estas declamaciones vagas, citan he
mientos irreprensibles, sus furores legítimos, que le chos; veamos si son bastantes graves para merecer
jos de ser dignos de castigo, merecian estátuas. Con tanto clamoreo.
viene á semejantes hombres predicar la dulzura, la Teodoreto, Hist. ecles. l. 5, c. 39, refiere que un
caridad, la tolerancia, é imputar crímenes al celo de obispo de Suza, en la Persia, llamado Abdas, ó mas
religion? bien Abdaa, hizo derribar un templo del fuego el año
Es preciso, dicen, honrar á la Divinidad, y jamás 1; que el rey, sabedor de este hecho por los magos,
pensar en vindicarla. Si esto significa que es necesa exhortó primero á este obispo para que reedificara es
rio permitirá todo incrédulo el blasfemar, impune te templo ; que negándose obstinadamente á ello, el
mente contra Dios, é insultar asi á todos los que le rey le hizo dar muerte; que mandó echar abajo to
adoran, preguntamos desde luego qué vertaja puede das las iglesias de los cristianos, que suscitó contra
resultar de esto el género humano: mas espliquemos ellos una persecucion que duró 30 años en la cual pe
los términos. Propiamente hablando, la Divinidad no reció un gran número de cristianos. Teodoreto con
puede ser ultrajada, ni vindicada, esencialmente feliz viene en que Abdas hizo mal en destruir este templo ó
é independiente, soberana señora de todas las criatu píreo; mas sostiene que este obispo tuvo razon en que
ras, inaccesible á toda necesidad y á toda pasion hu rer morir mas bien que volverle á edificar; pues el
mana, nada puede adquirir ni perder de su estado; construir un templo al fuego equivaltria á adorarle.
manda á los hombres el respetarla, adorarla, estarla Bayle, Barbeyrac, de Jancourt y otroshan insistido has
sumisos, no para su bien, sino por el de ellos. Está ta la saciedad sobre este pasaje de la historia, ya para
demostrado que ninguna sociedad puede subsistir sin manifestar los escesos á que el celo de religion puede
religion; el que ataque á esta, mina en cuanto le es conducir , ya para poner de manifiesto la falsa moral
posible los fundamentos de la sociedad... Cuando se le de un Padre de la Iglesia que creyó que el celo era su
castiga por sus blasfemias, se vindica á la sociedad y ficiente para justificar una acción injusta, tal como
no á la Divinidad; ella sabrá cuando quiera vengar— negarse á reparar el daño que se ha causado.
se segun la convenga. La brevedad de la narracion de Teodoreto nos da á
Por mas que se multipliquen los sofismas para pa entender que estaba mal informado de la naturaleza
liar los efectos de la impiedad, todo hombre que cree y circunstancias del hecho; si hubiese estado mejor
en Dios y ama su religión se sentirá siempre herído instruido, habria motivado de otra manera su opinión.
por sus invectivas, sarcasmos é insultos lanzados con Assemani, Bibliot Orien. l, 1, p. 183, y t. 3, p. 371,
tra los objetos que reverencia. Un ciudadano honrado nos dice, segun el testimonio de los historiadores
jamas sufrirá con paciencia que se denigre ó despre orientales, que no fue Abdas el que hizo destruir este
cie á su nacion, á su patria, á sus leyes, á sus cos píreo de los persas, sino un sacerdote de su clero, ba
tumbres, á sus usos; cómo habia de permanecer in jo pretesto de que este edificio contiguo á la iglesia de
diferente con respecto á sn religion, que es la primera ¿ cristianos los incomodaba para el servicio divino.
de todas las leyes y la base sobre que todas descan La cuestion es saber si el obispo debia ser responsable
san? Se empieza por ultrajarnos y se predica la tole de la accion de uno de sus sacerdotes y reparar el da
rancia; es como si un ladron predicara el desinterés ño. Creemos que no: que si lo hubiera hecho en las
al hombre que ha despojado; la burla es demasiado circunstancias, en que se encontraba, los magos le
fuerte. Guarden silencio los incrédulos, que no ire habrian acusado maliciosamente de apostasia, y esto
mos á informarnos de lo que creen ó no creen, mas es lo que Teodoreto quiso dar á entender.
quieren inquielar y provocar á todo el mundo y no Sostiene tambien Assemani que es falso que esta
ser molestados por nadie. persecucion que aconteció á fines del reinado de Isde
Tambien dicen que se ocultan muchas pasiones gerdo, durase mucho tiempo, pues se adormeció al
bajo la máscara al celo; sea asi. No se ocultan me momento. Volvió á empezar bajo el reinado de Vara
nos bajo la del bien público, del interés social, del ne su sucesor, no para castigar ningun delito de los
patriotismo, de la salvacion del Estado, del derecho, cristianos, sino porque se encendió la guerra entre los
de fa equidad, etc. Bajo este pérfido disfráz se han romanos y los persas. En estas circunslancias no de
ocultado todos los ambiciosos, los revoltosos y los em jaban los magos de presentar al rey á los cristianos
brolladores del universo; los incrédulos tambienechan como sospechosos, entregados á los romanos por n
mano de él para paliar el orgullo, los celos, y los clinacion, y de los que era preciso descenfiar: lal fue
deseos de dominar que los agitan. siempre la verdadera causa de las persecuciones que
Este celo, dicen por último, obra de la misma suerte esperimentaron por parte de los reyes de Persia. Es
en todas las religiones, tanto verdaderas como falsas. to es tan cierto, que cuando los nestorianos y los eu—
Qué importa? Todos los sentimientos naturales de la tiquianos fueron desterrados por los emperadores,
humanidad se encuentran de la misma manera en las fueron acogidos por los persas, porque se les conside
naciones civilizadas ó bárbaras, ilustradas, estúpidas, ró como enemigos del imperio. Tambien Mosheim,
felizó desgraciadamente situadas en el globo. Mas mejor instruido de estos hechos que los demas protes
si el celo respecto de una religion falsa es realmente un tantes, nunca ha vituperado tan groseramente como
falso celo, á sus sectarios es á quienes es preciso irá ellos la conducta de Abdas.
redicar la tolerancia y no á los que siguen nna re Barbeyraccita en segundo lugar el ejemplo de Mar
¿ verdadera. cos de Aretusa, que bajo el reinado de Juliano, re
Se nos objetan las guerras de religion; pero en este husó volverá construir un templo de paganos que
 CEL
CEL 38%)
había hecho demoler bajo el reinado de Constancio. no son, pues, otra cosa que su justicia soberaña y su
Como este obispo habia sido autorizado por el empe bondad con respecto al hombre.
De aqui no se deduce que Dios nos prohiba amar
rador antes de condenarle, hizo ver que Juliano lenia
mas derecho para mandar reedificar el templo que otra cosa que no sea él mismo; por el contrario, nos
manda amará nuestro padre y madre y al progimo
Constancio tuvo para demolerlo. Juliano fue tanto como á nosotros mismos; no condena á los que aman
mas criminal por abandonará Marcos
paganos de Aretusa, cuanto que al furor
este obispo le de los
habia á sus amigos cuando les manda amar tambien á sus
salvado la vida en su inancia. enemigos y hacer bien á todos. Mat. c. 5, y. y
6. Mas nos prohibe que nada amemos tanto como
Aun cuando esta clase de hechos fuesen cien veces á él y que nada prefiramos á él; quiere que estemos
mas graves y en mayor número, ¿seria suficiente para prontos á abandonarlo todo, á sacrificar hasta nues
probar que el celo de religion es una de las pasiones ira propia vida cuando lo ecsija su servicio: ¿hay en
mas fatales para el género humano? Comparad de esto injusticia?
clamadores impudentes, comparad esos delitos de al Cnando los paganosignorantes y estúpidos atribuian
gunos particulares con los felices efectos que el celo á sus dioses los celos, se los representaban como seme
de los todavia
sisten cristianosha obrado
despues en ytodo
de mil el mundo,años,
selecientos que sub
y de jantesdeá los
los pequeños tiranos, envidiosos y desconfia
los que vosotros mismos gozais; comparad el estado dos, cuales estaban rodeados; mas cuando los
filósofos han hablado de los celos de los dioses, han en
actual de las naciones cristianas con el de los pueblos tendido por esto como los autores sagrados, la justi
infieles que no han querido recibir el Evangelio, ó cia vengadora de la Divinidad que castiga á los cri
que han renunciado á él; por último, comparad 300 minales orgullosos é insolentes, y en esto no son re
años de persecuciones crueles, durante las cuales los prensibles ni los unos ni los otros. Notas de Mosheim
cristianos se dejaron degollar pacíficamente con esos sobre el sistema intelect. de Cudworth. c. 5. S. 39.
instantes de un falso celo del que estaban animados En cuanto á los celos con que los hombres se ha
muy pocos, y alreyéos todavia á exagerar los males cen culpables los unos respecto de los otros, estan
que ha producido. Mas los incrédulos no son bastante condenados terminantemente por el apóstol Santiago,
razonables para hacer ninguna comparacion; jamás c. 3. y. 1 y 16, y es uno de los vicios mas opuestos
dejarán de repetir las mismas invectivas; felizmente á la caridad cristiana, tan estrechamente mandada
se encuentran refutadas por sí mismas; no se atre por Jesucristo. San Cipriano hizo un tratado espresa
verian á permitírselas, si el celo de religion fuese en mente contra esta pasion, de Zelo et Livore; hace
general tan fogoso como dicen. ver sus consecuencias funestas, le atribuye los cis
mas y las heregias, y no hay cosa mas cierta que
Celos. Leemos en la Sagrada Escritura que el los celos contra los gefes de la Iglesia han tenido
Señor es un Dios celoso; que no sufre se rinda impu siempre mas parte que el celo en las quejas, en las
nemente á otro el culto que á él es debido. Erod. ca declamaciones y en los procedimientos violentos de
pítulo 20, y, 5; c. 3%, y 1, etc. Dice por un profeta: los reformadores de toda especie. Dice san Juan Cri
«yo he tenido contra Sion unos violentos celos, que me sóstomo que un hombre celoso merece ser separado de
han causado la mayor indignacion», Zach. c. 8, y . 2. la Iglesia como un fornicador público; mas para que
¿Conviene á Dios una pasion tan baja y odiosa? Los los celos pudieran ser el objeto de las censuras ecle
marcionitas, maniqueos, Juliano y otros enemigos del siásticas seria preciso que se probasen por alguna
cristianismo se escandalizaban de estas espresiones; accion, que proviniese evidentemente de este motivo.
los incrédulos modernos se las echan tambien en cara CELOS (AGUA DE). Se dice, Núm. c. 5, y.1%,
á los autores sagrados. Parece, dicen, que Dios se in que si un marido tiene sospechas respecto de la in
comoda cuando amamos á otra cosa que á él; esto es fidelidad de su muger, la llevará ante el sacerdote,
tan absurdo como la preocupacion de los paganos que que la hará tragar una agua amarga sobre la cual
creian que sus dioses eran envidiosos y celosos de la habrá pronunciado maldiciones; que si esta muger
prosperidad de los hombres, estuviese inocente no la sucederá ningun mal; que si
En la palabra ANTRoPoPATIA hemos esplicado ya fuese culpable morirá. Muchos incrédulos deducen de
por qué y en qué sentido los escritores sagrados pare esto que entre los judios podia un marido, por medio
ce que atribuyen á Dios las pasiones humanas; se han de los sacerdotes, envenenar á su muger cuando te
yisto obligados á hablar de Dios como se habla de los nia celos de ella. - .

hombres, porque no podian crear un lenguaje á pro— Estos críticos comprenderian lo obsurdo de su acu
pósito para espresar los atributos y las acciones de la sacion sireflexionaran que en el caso de infidelidad de
Divinidad. -
suesposa unjudio podia divorciarse de ella v despedir
la; esto era mas sencillo que envenenarla por medio
Sin sentir la pasion de los celos, obra Dios como si de un sacerdote. La ¿al es que el agua de los celos
fuese celoso; prohibe el rendir á otros seres el culto no podia producir naturalmente ningun efecto; no en
que le es debido, y amenaza castigar á los que se traba en ella mas que un poco de polvo del pavimen
hacen culpables de esta profanacion. No es porque to del tabernáculo, y las maldiciones que el sacerdo—
lenga necesidad de este culto, ni porque pierda nada te habia escrito en un pedazo de papel óvitela. Estas
de su felicidad cuando los hombres se le rehusan, si— maldiciones no tenian en sí la fuerza necesaria para
no porque el politeismo y la idolatria son absurdos matar á una muger culpable; era preciso que este
contrarios á la razon y al in sentido; van siempre efecto, cuando aconteciera, fuese sobrenatural, y en
acompañados de crímenes y desórdenes, y por consi este caso no dependia del sacerdote.
guiente son perjudiciales al hombre. Los celos de Dios
 CEL 385) CEL

Otros razonadores han creido que el agua de los ce hubiese sido cierto, toda la Judea habria podido de 4.
los era un espediente ilusorio y pueril que Moisés ha poner en contrario.
bia prescrito para calmar las sospechas celosas y las Qué opone á los milagros de Jesucristo? Este era el
acusaciones temerarias de los judios contra sus espo artículo mas importante. Dice que ninguno los ha vis
sas; que esta agua no podia hacer bien ni mal á las to, fuera de sus discípulos, y que estos los exagera
mujeres, bien fuesen culpables ó inocentes; pero era ron mucho, l. 1. n. 68. Mas síJesucristo ha dejado so
un medio para contenerlas en su deber por un terror bre la tierra al menos quinientos discípulos, como nos
ánico. Esta conjetura nada tiene de verosimil. De lo dice san Pablo, este número de testigos nos parece
jando aparte la inspiracion de Dios que dirigia á Moi-. bastante considerable, 1." Cor. c. 15, y. 6.
sés, el engaño que se le atribuye hubiera sido indigno Dice que Jesus obró sus milagros por la magia, por
de un legislador tan sabio. los encantamientos, por la invocacion de los demo—
nios ó genios; le echa en cara haber aprendido la
Celso. Filósofo del siglo II, célebre por su obra magia en Egipto y haber tenido despues el orgu
contra la religion cristiana, escrita hácia el año 178. llo de hacerse considerar como un Dios. l. 1, n. 6,
En nuestra época se han tomado el trabajo de re 28. Añade que otros muchos impostores hicieron mi
copilar en san Cirilo los fragmentos de los libros de lagros semejantes; que Jesus niismo prohibió darles
Juliano sobre este mismo motivo, haciendo de ellos asenso, n. 68. Acusa tambien en general á los cris
un discurso seguido; no conocemos ninguna obra de tianos de hacer uso de la magia, n. 6. Mas si los mi
nuestros adversarios en la cual hayan hecho lo mismo lagros de Jesucristo y sus discípulos no eran verdade
que con la de Celso. Sin duda ha sido un rasgo de ros é incontestables, para qué recurrir á la magia?
prudencia por su parte; este contiene muchas cosas Era preciso negarlos ¿ sin decir mas:
muy favorables al cristianismo y no pueden ser sos precisamente Celso conoceria que esto no era posible;
echosas. La refutacion que ha hecho Orígenes de que el testimonio constante y uniforme de los discí
as calumnias de Celso mas importante de las de Jesucristo, la confesion de los judios y la re
pulos
obras de este Padre. Parece suponer que su adversa volucion, que trajo consigo eran pruebas invencibles
rio era epicúreo; pero lo mas probable es que era de la realidad de los milagros,
un ecléctico ó un nuevo platónico, que hacia profe— Objeta contra la resurreccion del Salvador que otros
sion de no seguir ningun sistema, y de no atenerse muchos impostores habian prometido resucitar, ó
á ninguna escuela. pretendieron haber vuelto de los infiernos; que Jesus
Celso considera como una locura el proyecto forma resucitado no habia sido visto por nadie, esceptuando
do por los cristianos de convertir á todos los pueblos una mujer y algunos discípulos que soñaron, que no
y sujetarlos bajo la misma ley; quiere que cada na habian visto mas que un fantasma, ó forjaron esta
cion conserve su religion, cualquiera que sea. Oríge mentira. Si Jesus, añadia, hubiera resucitado, debia
nes contra Celso, lib. 5, n. 25, lib. 8, n. 72. Mas si manifestarse á sus enemigos, á sus jueces, á todo el
la religion de los egipcios y la de los judios eran falsas mundo: hubiera sido mejor que no se dejase crucifi
y absurdas como él lo sostiene, estos dos pueblos car, ó que bajase de la cruz en presencia de los ju
obraban mal al abrazar otra mejor? Si hubiese vivi dios, l. 2, n.5% y sig. -

do mas tiempo habria visto el proyecto de los cris
tianos casi ejecutado; se habria convencido que en del cual hubiesen jamás dicho un gran número de
todos los pueblos y climas produjo el cristianismo los
mismos efectos y la misma revolucion en las costum
bres como Orígenes lo ha demostrado.
Este filósofo conocia nuestros eyangelios; parece
que hasta tuvo á la vista el de san Mateo: sigue su
historia sumariamente y compara las dos genealogias
del Salvador, lib. 11, n. 32. Habia leido el antiguo
Testamento, al menos el libro del Génesis por com
pleto, l. 4, n. 36 y sig. Fue el primero que acusó á
Jesucristo de haber nacido de un comercio ilegítimo,
y pone este vituperio en boca de un judio, l. 1, nú
mero 28.
Si esta calumnia hubiese tenido algun fundamento,
Mas, ¿podia Celso citar el ejemplo de un impostor,
hombres, nosotros le hemos visto morir, una ciudad
entera le vió como nosotros, despues le hemos visto
vivo, le hemos tocado, hemos bebido y comido con él
despues de su resurreccion por espacio de cuarenta
días? A dónde hay un hombre, esceptuando áJesus,
que senohaya
delDebia un testimonio
dadocrucificar, semejante?
dejarse ó bajar de la cruz, ó
manifestarse átodo el mundo? Por qué lo debia ha
cer? En dónde estan las razones que prueban este
pretendido deber? Sostenemos que no lo debia hacer;
que aun cuando lo hubiese hecho, los incrédulos hu
bieran dicho lo mismo que de su resurreccion, aun
probada como lo está. - -

no lo habrian pasado en silencio los judios contempo Esta resurreccion fue publicada, creida y profesa
ráneos; no habrian permitido que Jesus enseñara, y da por millares de judios, cincuenta dias despues, en
pasase como descendiente de David. Cerinto, Carpó el mismo sitio en que se habia verificado: Celso no se
crates y los ebionitas no se obstinarian en sostener ha atrevido á ponerlo en duda; luego sus discípulos
que Jesus habia nacido de José y de Maria; los evan probaron sólidamente que no soñaron ni mintieron.
gelistas no se hubieran atrevido á trazar y publicar su Nada es mas absurdo que desechar un milagro, por
genealogia, y Jesus no hubiese encontrado ningun que Dios podía hacer otro, y dudar de una prue
discípulo entre los judios. ba porque Dios podia dar otras, Haga Dios lo que
No pone en ¿? el asesinato de los Inocentes,
quiera, los incrédulos estan resueltos áno confesar que
mandado por Herodes, para que pereciese Jesus niño; ha obrado bien; y por mas pruebas que se aleguen, no
no opone sino un razonamiento que nada significa, bastarán jamás para vencer su pertinacia. Muchos
l. 1, n. 58. Si este hecho tan palpable y público no han declarado que aun cuando vieran con sus pro
 CEL 386 CEL
pios ojos salir un muerto del sepulcro, no lo creerian. les. Podia consultar á los judios, comprobar si los
Conviene Celso en que el cristianismo fue predica discípulos de Jesucristo habian sido unos impostores.
do, se estableció é hizo progresos muy poco tiempo Dice que conocia ¿ el cristianismo, que
despues de la muerte de Jesucristo, l. 2, n. 2 y ; se informó de lodo; hace hablar hasta á un judio;
que los que publican su doctrina hacen una infinidad no obstante, no opone á los cristianos ningun ¿
de discipulos, n. 6. Conviene en que hay entre los decisivo, ningun testimonio contradictorio al suyo,
cristianos hombres virtuosos, sabios é inteligentes, ningun argumento temible. Si hubiese habido al—
lib. 1.º n. 27. No les echa en cara mas crímen que guna impostura de parte de aquellos, seria increi
el de reunirse en secreto contra la prohibicion de los ble que Celso no la hubiese desenmascarado. Consi
magistrados, el detestar los simulacros y los altares derándolo todo, su obra es uno de los monumentos
blasfemar contra los dioses. Rogamos á los incré mas honrosos y ventajosos para nuestra religion. Si se
ä. modernos que pongan atencion en esto, y que ¿ ver un estracto mas exacto de las objeciones
no lleven las calumnias mas allá que este filósofo. e Celso y de las respuestas de Orígenes, se hallará
Tan pronto aprueba como vitupera la firmeza de en el Tratado histórico y dogmático de la verdadera
los mártires, pero conviene en la crueldad de los su— religion, t. 1, 2.° edicion.
plicios que se les hacia padecer, lib. 8, n. 39,43, 8,
etc. No obstante, este es un hecho que se ha tratado Cementerio. Véase FUNERALEs.
de poner en duda en nuestros dias. Distingue la gran
Iglesia de las demas sectas que se denominaban cris Cena, del latin caena y del griego covNE, co
tianas: añade que estas diferentes secas se aborre mida comun de una reunion de familias. Por qué die
cian y despedazaban, lib. 5, n. 59 y sig. ron los antiguos este nombre á la comida de la noche
Esto es justamente lo que prueba, que no pudo mas bien que á la de la mañana ó á la del mediodia?
haber avenencia entre los primeros hijos del cristia Porque la familia de un labrador se halla separada
nismo para forjar los hechos, publicarlos, y engañar todo el dia por los trabajos de la agricultura, comen
á los hombres crédulos. Las divisiones empezaron á cualquier hora y en el campo, y no se reune sino
desde el tiempo de los apóstoles; se quejan de ellas y por la noche; la cena es la que los reune.
desenmascaran á los falsos doctores; siempre estu— Se da el nombre de cena con especialidad á la últi
vieron vigilados por enemigos atentos y celosos, ya ma comida que hizo Jesucristo con sus apóstoles reu
judios ó va paganos, y aun por filósofos mal conver nidos en la víspera de su muerte, en la cual comió la
tidos. Mas entre los enemigos que levantaron el es— Pascua con elios, y despues instituyó la Eucaristía;
tandarte contra los apóstoles, ninguno les ha acusa la lglesia celebra su memoria el Jueves Santo. Para
do de haber forjado, disfrazado y desnaturalizado los recordarnos la humildad de Jesucristo, que despues
hechos del Evangelio. Si los hechos son verdaderos, de la cena lavó los pies á sus apóstoles, se acostumbra
el uanismº está probado de una manera inven en todas las iglesias á lavar pies á doce pobres.
CDe, Nuestros reyes renuevan tambien esta ceremonia
No es fácil comprender cuáles eran las opiniones de tierna y magestuosa, y esto es lo que se llama hacer
Celso relativamente á la divinidad: su filosofia es un la cena. Despues de un sermon acomodado al asunto,
caos ininteligible, y su obra un tejido de contradic y despues de echada la absolucion por un obispo, el
ciones. A veces parece que admite la providencia, rey, acompañado de los príncipes de la sangre y de
otras la niega; une al epicureismo el dogma de la los altos empleados de la corona, lava y besa los pies
fatalidad; cree que los animales son de una naturale á doce pobres, les sirve á la mesa y les da una limos
za superior á la del hombre. No exige que se rinda na. Despues de mediodia la reina practica la misma
un culto á Dios, criador gobernador del mundo, ceremonia con doce jóvenes.
sino solo á los genios ó á los dioses de los paganos; Una de las cuestiones que hay entre los teólogos y
ensalza los oráculos, la adivinacion y los pretendi los comentadores de la Sagrada Escritura es el sa
dos prodigios del paganismo. Tan pronto parece ber si en la última cena comió Jesucristo la Pascua
aprobar como vituperar el culto de los simulacros ó con sus apóstoles: algunos autores modernos sostie—
de los ídolos. Propiamente hablando, no sabia él nen que no la comió; probaremos lo contrario en la
mismo lo que creia ó no creia. En general tal es la palabra PAscUA.
filosofia de la mayor parte de los incrédulos; en to Cuando los protestantes dieron el nombre de cena
dos los siglos se parecen. - á la manera con que celebran la institucion de la
La mayor parte de las acriminaciones que hace á Eucaristía, se separaron del antiguo uso de la lgle—
los cristianos en general no podian recaer sino so sia, y abusaron del término por necesidad desistema.
bre los gnósticos, á quienes confundia sin razon con Han querido dar á entender con esto que toda la
los verdaderos cristianos. esencia del sacramento consiste en la comida religio
La exactitud con que Orígenes refiere las propias sa que hacen los fieles comulgando; mas toda la an
alabras de Celso prueba que nuestros antiguos apo tigüedad depone contra ellos. Desde el primer siglo
¿ no han tratado ní de suprimir las obras de de la Iglesia ha estado en uso el llamar Eucaristia á
sus adversarios, ni de disfrazar sus objeciones, y la accion de consagrar el pan y el vino, convirtiéndo
hacerlos odiosos. Sin los libros de Orígenes, qué ha se estas sustancias en cuerpo y sangre del Señor. Es
bria en el dia de lo que Celso escribió? Este filó— la cena estaba terminada cuando Jesucristo consagró
sofo era casi contemporáneo á los hechos, pues que la Eucaristía para dársela á los apóstoles. Luc. c. 22,
vivió á mediados del siglo, ll, cincuenta ó sesenta y. 20; I. Cor. c. 11, y.25. Es un absurdo el mirar
jaños despues de la muerte del último de los apósto la accion de los apóstoles y no la de Jesucristo como
 CEN 387 CEN
la parte esencial y principal de la ceremonia. Véase Supersticionl dicen los protestantes; mojiganga de
EUCARISTIA, S.3. los sacerdotes! esclaman los filósofos. Nosotros les re
plicamos: vosotros no sabeis siquiera lo que significa
Cenáculo. La víspera de su pasion dijo nuestro el rito que vituperais. En la bendicion de la ceniza,
Salvador á sus discípulos: id á preparar la cena de la Iglesia ruega á Dios que inspire sentimientos de
la Pascua en Jerusalen; que encontrarian un cenacu penitencia á los que la reciban, y perdone sus peca
lo preparado, es decir, una sala con mesas para co dos; el fiel que se presenta viene á ratificar por sí
mer, y lechos sobre los que se echaban para verii mismo esta oracion de la Iglesia, á señalarse con la
carlo. En los siglos posteriores se manifestaha en imagen de la muerte á fin de desprenderse del peca
Jerusalen una sala que fue convertida en iglesia por do. En donde está la supersticion? Separar del culto
la emperatriz Sta. Elena, en la que se decia que nues religioso los símbolos mas naturales y espresivos es
tro Salvador habia celebrado su última cena y habia ahogar á la vez la religion y la naturaleza.
instituido la Eucaristia; mas puede tenerse en duda el
que esta sala se salvase de la ruina de Jerusalen Cenobita. Religioso que vive en comunidad
cuando se apoderaron de ella los romanos; á lo mas bajo una regla comun con otros religiosos: esta pa
podria conocerse por tradicion el sitio sobre el cual labra viene de KovNos, comun, y de Bvos, vida. Un
estaba edificado el cenaculo. cenobita se distingue de un ermitaño ó de un anaco
Mas el respeto qne se ha tenido siempre al lugar reta en que estos viven en la soledad.
en se creia que Jesucristo habia instituido la Euca El abate Piammon habla de tres especies de reli
ristia prueba suficientemente la alta idea que se con giosos que habia en la Tebaida de Egipto, á saber:
cibió de esta accion de Nuestro Señor. Si se hubiera los cenobitas que vivian reunidos en comunidad; los
mirado entonces la cena bajo el mismo punto de vis anacoretas, que habitaban solos, y los sarabaitas que
ta que lo hacen, los protestantes, no se hubieran eran vagamundos; estos últimos se miraron siempre
acordado de cambiar el cenáculo en iglesia. como religiosos falsos. Refiere al tiempo de los após—
toles la institucion de los cenobitas: es, segun él, una
Ceniza. El miércoles de ceniza es actualmente imitacion de la vida comun de los fieles de Jerusalen;
el primer dia de cuaresma. Es probable que se deno mas estos fieles eran gentes casadas que no habian re
minase de esta manera á causa de la costumbre de los nunciado al mundo. S. Pacomio pasa por el primer
penitentes en los primeros siglos de presentarse es fundador de la vida cenobítica, porque fue el primero
ie dia á la puerta de la iglesia vestidos de cilicios y que formó comunidades bajo ciertas reglas. Antes de
cubiertos de ceniza. él, los religiosos eran anacoretas ó solitarios. No obs
Mas qué relacion hay entre la ceniza y la peniten tante, se dice que S. Antonio construyó un monaste
cia? Es un monumento de las costumbres antiguas. La rio veinte años antes que S. Pacomio; mas este fue
varse el cuerpo y los vestidos, perfumarse la cabeza, el primero que escribió una regla monástica.
era el símbolo de la alegria y de la prosperidad; por En el código Teodosiano, l. 11, tít. 30, De Apella
el contrario, la señal de un dolor profundo era la de tione, Leg.57, los cenobitas son llamados synoditas li
arrartrarse por el polvo y permanecer echado. Esto teralmente, gentes que marchan á la vez, que siguen
se ve todavia á veces entre las gentes de los campos el mismo camino; no eran pues criados de los religio
que se entregan violentamente á los impulsos de la sos como han creido algunos glosadores, sino los ce
naturaleza. Un hombre qne se presentaba con el cuer nolitas. Bingham, Orig. ecles, t. 3., l. 7, c. 2, S. 3.
po, los cabellos y los vestidos cubiertos de polvo anun Algunos escritores modernos, que han considera
ciaba por este abandono esterior el luto y la afliccion. do á lo cenobitas bajo un aspecto puramente político,
Los ejemplos de esto son frecuentes en la Sagrada Es han deducido que es de un interés público el hacer
critura; Job, la historia de los Reyes, los profetas y subsistir un gran número de hombres con la menor
y el Evangelio hablan tambien de esto. -
espensa posible; que la vida comun es mucho me
Para espresar David un dolor amargo dice que nos dispendiosa para cada individuo que la vida par
comia la ceniza como el pan, ó mas bien con el pan. ticular; que bajo este punto de vista los conventos son
Psalmo 101, y 10. Como los antiguos cocian su pan un medio de economía: la esperiencia confirma esta
bajo la ceniza, el no tomarse el trabajo de sacudir la observacion. Por lo que respecta á nosotros, que no
ceniza con que el pan estaba cubierto era una de las debemos mirar este objeto sino por el lado de las cos
señales de afliccion. tumbres, creemos º muchos hombres reunidos, que
En el dia, en la Iglesia romana, el miércoles de ce. viven bajo una regla comun y estan sujelos á los mis
niza el celebrante, despues de haber recitado los sal mos deberes, tienen en el ejemplo de sus hermanos
mos penitenciales y otras oraciones, bendice la ceniza, un medio poderoso Inas para sostenerse en la virtud;
y la pone sobre la cabeza del clero y del pueblo que que á pesarde las censuras lanzadas por la malignidad
la reciben de ¿? á cada uno de los que se la da contra este género de vida, es útil y laudable bajo to
le dice estas palabras: Acuérdate, hombre, que eres pol dos aspectos. Véase MoNue, EsTADo monástico.
co y en polvo te has de convertir. Esta es la senten
cia terrible que Dios pronunció contra el primer pe Censuras eclesiástieas. Son las penas que
cador. Gén. c. 3, y . 19. Cuando subsistia la cos la Iglesia impone á los que desobedecen sus leyes.
tumbre de quemar los muertos, un poco de ceniza Pues que en virtud de la institucion de Jesucristo,
sacada de la hoguera y aplicada sobre la frente de un los pastores de la lglesia tienen derecho á hacer leyes,
hombre era un símbolo todavia mas enérgico ; era tambien tienen el poder de imponer penas, privará
un decreto de muerte todavia mas sensible. los cristianos refractarios de los bienes espirituales
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que son concedidos á los fieles sumisos y dóciles. Véa espresa que Dios es el autor del pecado, conducía
se Leves EclesIAsTICAs. Mas como la autoridad de la contraria á la santidad de Dios y á su justicia. Esta
Iglesia es la de una madre tierna, no se resuelve á nota es la mas fuerte con que puede ser calificada una
castigar sino en casos graves, y despues de haber proposicion: dá lugar para pensar que su autor ha
tratado de intimidar por medio de amenazas á sus desconocido una verdad, no solo revelada sino dicta
hijos desobedientes. da por la recta razon, y que ha perdido todo senti
Se distinguen tres especies de censuras: la escomu miento de respeto para con la Divinidad.
nion, la suspension, y el entredicho. Véanse estas pa La doctrina herética es la que contraría directa
labras en particular. Hay censuras reservadas y no mente una decision terminante de la Iglesia. Suede
reservadas: todo sacerdote aprobado puede absolver suceder á un escritor cualquiera el contradecir una
de las segundas, y no de las primeras, para las cua verdad revelada sin caer en la heregía, cuando la
les es preciso un poder especial del superior eclesiás Iglesia no haya decidido espresamente que tal es el
tico que las ha impuesto. En el tribunal de la peni— sentido de la revelacion; mas cuando la Iglesia lo
tencia, el sacerdote, antes de absolver al penitente ha declarado asi, es una pertinacia y una heregía el
de sus pecados, le absuelve de las censuras no reser— resistirse á su decision.
vadas en que pueda haber incurrido. Véase el antiguo Cuando se dice que una proposicion sabe á herética
Sacramentario por Grandcolas, 1.° parte, pág. 554. ó se aproxima á la heregía, se entiende que da lugar
Tal vez en los siglos poco ilustrados, cuando los á pensar que el autor niega y quiere combatir un
pueblos no podian ser contenidos sino por el temor, dogma decidido por la Iglesia. Si un teologo sostu—
los superiores eclesiásticos abusaron alguna vez de las viera que la Eucaristia no es mas que la figura del
censuras, principalmente empleándolas en intereses cuerpo y sangre de Jesucristo, esa proposicion seria
puramente civiles ó en casos poco graves; mas este herética, porque la Iglesia ha decidido solemnemente
abuso no es una razon para poner en duda el poder la presencia real de Jesucristo en la Eucaristia. Si se
que Jesucristo dióá su Iglesia, poder necesario para limitara á decir que es la figura ó la señal del cuerpo
conservar la disciplina eclesiástica. y sangre de Jesucristo, sin dará entender que es al—
guna cosa mas, esta manera de hablar se aproxima—
Cenasura de libros ó de «loetrimaas. La ria á heregia; haria sospechar que el autor no ad
lglesia, que ha recibido de Jesucristo la comision y mite la presencia real, á menos que en el resto de su
autoridad de enseñará los fieles, tiene por consiguien obra no hubiese profesado distintamente este artículo
te el derecho de condenar todo lo que es contrario á de nuestra fé.
la verdad y á la doctrina de su divino Maestro. Si uno Cuando una proposicion es condenada como erró—
se limitara á dará sus hijos los libros propios para su nea, parece que sea algo mas que si lo fuese como
instruccion, sin quitarles los que pueden estraviar— falsa. Una falsedad puede estar sin consecuencia,
los no llenaria mas que la mitad de su cometido. cuando de ella no resulta nada contra la fe ni contra
Todo el que publique escritos se tiene que sujetar á la las costumbres; se llama error una falsedad que ataca
censura de la lglesia, y si rehusa conformarse á ela, á una y otras. Sin embargo, todo error no es una he
es culpable de desobediencia á la autoridad lejítima. regia formal. Es falso, por ejemplo, que S. Pedro no
Desde el momento en que una obra cualquiera es estuviese en Roma, pero no se culpará de heregía á
condenada como perjudicial, ya no es permitido leer un hombre que se limitara á poner en duda este he
la ni guardarla; obstinarse en hacer su apología, es cho. Si afirmara que el soberano pontífice no es el su
oponerse sin justicia á la autoridad de Jesucristo cesor de S. Pedro, seria una doctrina errónea, de la
. InlSII10, cual se deduciria que el soberano pontífice no es el
Desde que se multiplican los libros hasta el infini gefe visible de la lgesia. Esta última proposicion se
to, ninguna obra particular de doctrina, de moral ó aproximaria á heregía, porque lo es el sostener que
de piedad es absolutamente necesaria á los fieles; no tiene un poder de jurisdicion sobre toda la lglesia;
cuando sea condenada ya no les puede ser útil. lo contrario está decidido terminantemente por el con
Bajo el nombre de censura, no se comprende co cilio de Trento.
munmente la condenacion de una doctrina dada por Una doctrina es escandalosa ó perniciosa para la
un concilio, sino la hecha ya por el soberano pontí salvacion de las almas cuando tiende á disminuir en
fice, ya por uno ó muchos obispos, ya por los teólo los fieles el horror al pecado, el respeto á las cosas
gos; se llaman calificaciones las notas que han recai santas, la sumision á la Iglesia; una proposicion fal
do en las proposiciones que les han parecido repre sa en punto á moral se halla comunmente en este
liensibles, bien se apliquen distintamente estas notas caso. Se deben mirar como escandolosos los elogios
á cada proposicion en particular, ó bien que hayan prodigados por ciertos escritores á los hereges y á los
sido solo censuradas en general ó en globo. enemigos de la Iglesia con el designio de persuadir que
Puede ser condenada una proposicion como impía, han sido condenados sin razon, que su doctrina era
blasfema, herética, que sabe á herética, errónea, verdadera é inocente; afectacion muy comun en nues
falsa, escandalosa, capciosa, temeraria, peligrosa, tros autores modernos.
mal sonante, ofensiva para los oidos piadosos: es muy Cuando una opinion es contraria á la del mayor
á propósito el dar una idea clara y precisa de cada número de teólogos y á la creencia comun de los fie
una de estas calificaciones. les, que no está fundada sino sobre conjeturas y ra
Una doctrina ó una proposicion es impia y blasfema ciocinios poco sólidos, es temeraria; esla es la nota
cuando atribuye á Dios cualidades ó una conducta que mereceria un escritor que atacara la concepcion
que deroga sus perfecciones infinitas; tal es la que inmaculada de la Vírgen Santísima. Su doctrina ofen
 CEN 389 CEN
deria tambien á los oidos piadosos, porque todo cris sido por una apología completa. El que resiste y de
tiano que hace profesion de piedad, honra singular— clama contra sus jueces es un litigante de mala l.
mente á la madre de Dios, y no puede permitir que se En un siglo en que la mayor parte de los escritores
ataquen sus augustos privilegios. . . parece que están poseidos del espíritu de vértigo, no
Se llama doctrina peligrosa aquella de la cual pue respetan ninguna religion ni autoridad, se escitan
den abusar los hereges para sostener sus errores; mas unos á otros para despreciar toda censura: por lo lan
lo que es peligroso en una época puede dejar de serlo lo no se está en el caso de considerarlos. La intrepi
en otra; asi la palabra consustancial fue rechazada dez con que se presentan no les pondrán jamás á cu.
por un concilio de ¿? , porque los partidarios bierto de la ignominia que merecen; sus obras caerán
de Sabelio abusaban de ella para confundir las Perso en el olvido, y la censura subsistirá. Cien autores,
nas divinas y reducirlas á una sola; mas cuando no que en otro tiempo hicieron mucho ruido, no sen en
hubo este peligro, el concilio de Nicea consagró este el dia conocidos sino por la ignominia con que van
mismo término para espresarla divinidad deJesucristo. eubiertos sus nombres; los atentados de nuestros pri
Si una proposicion espresa una verdad en términos meros incrédulos han sido borrados por los de sus su
duros, indecentes, capaces de hacerla odiosa, se ca cesores, y ya no se acuerdan de los que les prece
lifica como mal sonante. Cuando un teólogo dice que dieron; lo mismo sucederá en todas las épocas. Véase
faltó la gracia á S. Pedro, da á entender que le faltó LIBR0S PROHIBIDOS,
toda gracia, lo que es falso. S. Pedro no tuvo una
¿ eficaz y sí una suficiente; de otra suerte su cai Centurias de Magdebourg. Cuerpo de
a no hubiese sido ni libre ni imputable á pecado. Por historia eclesiástica compuesto por cuatro luteranos
igual razon, esta misma proposicion es capciosa, por de Magdebourg que la empezaron el año 1560. Estos
que bajo ciertos términos que pueden tomarse en buen cuatro autores son: Matias Flaccio, por sobrenombre
sentido, oculta el veneno del error. IIolden, de Illyrico, Juan Wigam, Mateo Lejudin, Basilio Fa
resolut. fidei, l. 2, c. 8, sect. 1; Cano, de locis Theol. bert, á los cuales añaden unos á Nicolás Galsus y otros
l. 12, c. 10. á Andrés Corvino. Illyrico dirigia la obra, y los otros
En nuestro siglo se ha puesto formalmente en trabajaban bajo su direccion. Se la ha continuado
cuestion si el soberano pontífice y la Iglesia pueden hasta el siglo XIII.
condenar un número de proposiciones in globo, eomo Cada centuria contiene las cosas notables que pasa
respectivamente falsas, escandalosas, heréticas, etc. ban en un siglo. Esta compilacion exigió mucho tra
sin aplicar á cada una en particular la nota o califi bajo; mas no es una historia fiel, ni esacta, ni bien
cacion que la convenga. Se decia, qué nos enseña una escrita. El fin de los centuriadores era el atacar á la
condenacion semejante? Nos enseña que no hay nin Iglesia romana, establecer la doctrina de Lutero y
guna de las proposiciones contenidas en la censura desacreditar á los PP. y á los teólogos católicos. El
que no merezca alguna de las notas ó calificaciones cardenal Baronio emprendió sus Anales eclesiásticos
que les son impuestas en general; por eonsiguiente que para oponerlos á las centurias.
no es permitido sostener ninguna de ellas, tal como Se ha echado en cara á Baronio demasiada credu
se encuentra en el libro condenado; nos enseña que lidad y falta de critica: los que él refula pecaron por
la lectura de este libro es perniciosa á los fieles, y no el esceso contrario; rechazaron y censuraron todo lo
es permitida á ninguno. Qué importa al simple fiel el ue les incomodaba. El P. Pagi, franciscano, Isaac
saber si tal proposicion es herética ó solamente erró— asaubon, el cardenal Noris, Tillemont, el cardenal
nea y falsa? Aun cuando , no fuera mas que mal so Orsi, etc., notaron las faltas de Baronio, y se han reu
nante ó capciosa, no es lo suficiente para que deban nido sus observaciones en una edicion de los Anales
abstenerse de ella? A los teólogos toca el ver en qué eclesiásticos publicados en Lucques. Por el contrario,
términos debe anotarse cada una. -
los errores y calumnias de los centuriadores han sido
Sin duda alguna es muy apropósito el recomendar repetidos, comentados y ¿ por los incré
la equidad, la moderacion, el desinterés, la indul dulos sus copistas: es inútil refutarlos con pruebas
¿"¿ la timidez misma á los teólogos encargados invencibles; los que tenian interés en acreditarlos no
e censurar los libros; es preciso rogarles que se desisten, y á fuerza de renovar las mismas impostu—
acuerden que en estas circunstancias son jueces y no ras llegan á persuadir á los ignorantes. V. uston. A
disputadores; que deben renunciar á todo sistema, á ECLESIASTICA.
toda prevencion contra un autor y contra la corpora
cion de que es miembro, á todo espíritu de partido; cerdonianos. Ilerejes del siglo II. Cerdon, su
que una censura, que tenga cualquiera de estos delec maestro, nació en Siria; siguió los errores de Simon
tos, es nula y sin autoridad. Mas es necesario no olvi Mago; fué á Roma en el pontificado del papa Higinio.
dar tampoco el predicar á los escritores la prudencia permaneció mucho tiempo allí, esparció su doctrina,
y docilidad. Cuando un autor no ha escrito con el de ya en secreto, ya abiertamente. Reprendido por su
temeridad fingió arrepentirse y reunirse á la Iglesia;
signio de dogmatizar, de hacer ruido, inquielará los mas su hipocresia fue conocida, y fue arrojado de R0
pastores y á los teólogos, merece indulgencia, consien ma absolutamente. - - -

te voluntariamente en esplicarse ó retractarse: si tu

viera intenciones contrarias, no tiene derecho á exi Como la mayor parte de los herejes de este mismo
gir ningun miramiento. La censura á que se somele siglo sostenia Cerdon que este mundo no era obra de
un autor sin resistencia no le perjudica á los ojos de un Dios lodo poderoso, sabio y bueno asi como
sus contemporáneos ni de la pósteridad. Fenelon se tampoco la rigorosa.
ley de Moisés, que le parecia imperecta y
adquirió mas gloria por su suumision que si hubiese demasiado
TOMO l.
En su consecuencia admitia dos
55
 CER 390 CER
principios de todas las cosas, el uno bueno el otro habia producido muchos espíritus inferiores á sí mis
inalo: á este último era el que atribuia la fabricacion mo, y les dejo el cuidado de fabricar y gobernar el
del mundo y la ley de Moisés. El otro, á quien llama mundo. -

ba el principio desconocido, era, segun él, el padre de Los razonadores se dividieron entre estos dos siste
Jesucristo; mas no confesaba que el Hijo de Dios se mas; mas todos convinieron en sostener que el lijo de
hubiese revestido realmente ¿ humanidad, que hu Dios, que miraban como un ser muy inferior á Dios,
biese nacido de una virgen y sufriera verdaderamente no se habia hecho hombre sino en apariencia, y no
los padecimientos y la muerte; todo esto decia, no se habia tenido mas que una carne fantástica y aparente.
hizo sino en apariencia. No admitia la resurreccion Es evidente para todo hombre que quiere reflexio
de los cuerpos sino la de las almas; por consiguiente nar que el sistema de estos era no solo absurdo en sí
suponia que estas morian con el cuerpo. Rechazaba mismo, sino incapaz de resolver ninguna dificultad.
¿ los libros del antiguo Testamento, y no admitia Porque últimamente, que el mismo Dios supremo ha
del nuevo mas que el evangelio de S. Lucas; y aun ya hecho el mundo tal como es, ó que lo haya dejado
este en parte. Los mismos errores fueron sostenidos fabricar á obreros impotentes é inhábiles, la falta por
por Marcion y sus discípulos. V. MARCIoNITAs. su parte era igual; que dado por sí mismo una
Muchos críticos dicen que además de los dos prin— ley imperfecta y viciosa, ó que la haya dejado esta
cipios, el uno absolutamente bueno y el otro malo por blecer, el inconveniente es el mismo. ¿No es tan in—
naturaleza, Cerdon y Marcion admitian un tercero in digno de la Divinidad el engañar á los hombres, fas—
termedio, que era de una naturaleza mista, y á este es cinar sus ojos, inducirlos á errar con falsas aparien
al que atribuian los herejes la creacion del mundo y cias de una carne humana, como revestirse de las
la legislacion mosáica. Mas si es verdad que segun su miserias de la humanidad? En cuanto á la hipótesis
opinion, este principio misto aunque continuamente de los dos principios coeternos, demostraremos en el
en guerra con el principio malo, aspira no obstante lo artículo MAL que no satisface mas á la razon que la
mismo que él á suplantar al Ser Supremo y á someter anterior.
á su própio imperio todos los habitantes de la tierra; Mas los razonadores del siglo II, á pesar de su per
, este principio misto nos parece mucho mas malo que linacia, no se atrevieron á negar los hechos publica
bueno. dos por los apóstoles, el nacimiento, los milagros, la
Es un rasgo de perversidad no solo el rebelarse predicacion , los padecimientos, la muerte y resur
contra el Dios soberanamente bueno, sino el querer reccion, al menos aparente, de Jesucristo, porque
sustraer de su gobierno á los hombres que desea ha— todos estos hechos estaban probados por la notoriedad
cer felices. Segun los cerdonianos, el Dios bueno ha pública; no suscitaron ninguna sospecha contra la
enviado áJesucristo, su Hijo á la tierra para destruir sinceridad y buena fé de los apóstoles. Este es el pun
el imperio del principio malo y el del principio misto, to esencial. De esto resulta contra los incrédulos, que
para conducir hácia Dios á las almas que estos ha— los apóstoles, no solo subyugaron á ignorantes, hoin
ian seducido. Los dos, dicen, se han unido contra Je bres crédulos é incapaces de examinar hechos, sino á
sucristo, suscitaron contra él á los judios para cruci— filósofos muy dispuestos á contradecirlos, si hubiesen
ficarle y darle muerte; mas como Jesus no tenia sino podido, y que no obstante confirmaron su testimonio.
un cuerpo fantástico no pudieron obtener éxito sino
aparentemente. Hé aquí, pues, el principio misto, Ceremonia. Signo esterior ó manifestacion de
pretendido Dios de los judios, «ser tan perverso como los sentimientos del corazon; tal parece ser la etimo—
el principio malo ó el príncipe de las tinieblas; asi la logia de este término: se deriva de ker, cor, el cora
suposicion de este principio intermedio no sirve para razon y de moneo, advertir, dará conocer. Poner en
nada; no es sino un absurdo mas. cuestion si las ceremonias en general son necesarias,
Por otra parte, ó es el Dios bueno el que ha dado es preguntar si los hombres tienen necesidad de co
la existencia á los otros dos principios, ó son eternos municarse mútuamente sus pensamientos y afeccio
y existentes por sí mismos como él. Si son eternos, es nes por signos esteriores. ¿Pudiera existir sin esto en
un absurdo el no suponerlos absolutamente buenos tre ellos alguna sociedad?
por naturaleza: ¿de qué causa ha provenido su mali No hay ningun sentimiento que no se manifieste al
cia? Si es el Dios bueno quien los ha producido, ó ha esterior por un gesto particular; no tenemos necesi
sido imprudente y limitado en sus conocimientos, ó dad de lecciones para pretender que prosternarse es
ha hecho mal en producirlos, y es responsable de to una señal de respeto y sumision, que levantar los ojos
dos los males que de ello han resultado. y las manos hácia el cielo es una señal de invocación;
No es inútil observar que todas las heregías del que una ofrenda es un testimonio de reconocimiento;
siglo ll tuvieron el mismo origen, á saber la difi— un hombre que se da golpes en el pecho manifiesta
cultad de concebir que un Dios bueno sea el autor del ¿ se arrepiente; el que se lava el cuerpo da á enten
mal; que haya producido criaturas sujetas á tantas er que trata de puriticar su alma, etc. Un discurso
imperfecciones y padecimientos, y haya impuesto á acompañado de estos signos elocuentes hace una im
los hombres una ley tan rigorosa como la de Moisés. presion mas profunda; hace pasar al alma de los oyen
Los filósofos no concebian mejor que un Dios se hubie ies las pasiones de que el orador está agitado. Todo el
se humillado hasta encarnar en el seno de una mujer, mundo conviene en que son necesarias las ceremonias
revestirse de nuestras miserias y morir ignominiosa en la vida civil, que entre los chinos suplen á la moral
mente sobre una cruz. Para salir de este embarazo, y á la legislacion; ¿y por qué no ha de suceder lo mis
unos imaginaron dos principios coeternos, uno causa mo en la religion? Los signos esteriores de benevolen
del bien, y el otro autor del mal; otros creián que Dios cia mútua suavizan las costumbres; las demostracio
 CER ao CER
nes de respeto hácia la Divinidad hacen al hombre nes y los caprichos de una imaginacion estraviada.
religioso. El deseo inmoderado de obtener del cielo bienes tem
Entre las ceremonias que tienden á este fin, las porales, la impaciencia de librarse de un mal presen
unas son santas y laudables, las otras supersticiosas te, una curiosidad desenfrenada de conocer el porve
y absurdas. No se deben colocar entre las primeras nir, las falsas observaciones de la naturaleza, los equí
sino las que tienen por objeto el culto del verdadero vocos inevitables del lenguage, hé aqui las verdaderas
Dios, y que él se ha dignado prescribir y aprobar. Ja fuentes de todas las supersticiones imaginables. Véase
SUPERSTIcio.N.
más hubo religion sin ceremonias.
Desde el principio del mundo, los primeros hom Ninguna de estas causas ha contribuido á las cere
bres que no habián recibido otras lecciones que las monias religiosas de los adoradores del verdadero
Dios; una sabiduria superior presidió á su institucion;
de Dios, le hicieron ofrendas y sacrificios; le eleva para
ron votos, levantaron altares, los consagraron con convencerse de ello, basta considerar su analo
efusiones de aceite y perfumes, juraron por su santo ¿ con las necesidades de la humanidad bajo las di
nombre, le tomaron por testimónio de sus alianzas, erentes épocas de la revelacion.
usaron de purificaciones, comieron en comun la car En la primera edad del mundo las ceremonias te
ne de las víctimas, etc. Asi es como la historia santa nian por objeto inculcar á los hombres el dogma
nos pinta la religion de los patriarcas. esencial de un solo Dios, criador y conservador del
Cuando Dios reunió á los hehreos en cuerpo de na universo, soberano distribuidor de los bienes y de
los males, protector de las familias, vengador del
cion les prescribió, por órgano de Moises, los ritos qne crimen y remunerador de la virtud, recordarles que
debian observar; las leyes ceremoniales fueron uni el ¿ es pecador y tiene necesidad de perdon;
das á sus leyes civiles. Mas este ceremonial no era tendian á estrechar entre sí los lazos de la sociedad
absolutamente nuevo para ellos; una parte habia sido
ya practicada por sus padres. En vano el caballero fraterna.
las en
Seria muy facil demostrarlo considerándo
particular. Su uso debia pues preservar á los
Marsham, Spencer y otros, decian que la mayor par hombres del politeismo, de las preocupaciones que
te de las ceremonias judias eran copiadas de las de los despues han llenado el universo de una multitud de
egipcios; los patriarcas usaron de ellas para honrar á espíritus y genios llamados dioses ó demonios: error
Dios antes que los egipcios las profanasen con la ido que ha traido consigo la idolatria con todos sus crí
latria: un gran número de estos ritos tendia á preser— menes. Una vez que son necesarios al hombre los ri
var á los judios de las supersticiones de sus vecinos. tos esteriores, no puede preservarse de las ceremonias
Véase LEYEs ceREMoNIALEs.
supersticiosas sino por medio de las prácticas santas y
Por último, cuando plugo á Dios reunir á todas las razonables.
naciones en una misma sociedad religiosa, envió á Bajo la ley de Moisés los ritos religiosos estaban des
su Hijo único para enseñarlos á honrar á Dios en es— tinados á persuadir á los judios que Dios es no solo el
píritu y en verdad. Este divino Maestro instituyó por único Señor de la ¿ sino el soberano legis
sí mismo una parte de nuestras ceremonias, y dejó á lador, el fundador y el padre de la sociedad civil, el
los apóstoles, llenos de su espíritu, el cuidado de es— árbitro de las naciones, que dispone de su suerte como
tablecer las demas. Desde los tiempos apostólicos, aun le place, las recompensa con la prosperidadó las cas
en medio de las persecuciones, vemos ya una liturgia, tiga con las desgracias. La mayor parte de las ceremo
sacramentos, un clero, una gerarquía. En el siglo IV, niasjudias eran otros tantos monumentos de loshechos
cuando la Iglesia tuvo libertad para practicar su cul— milagrosos que probaban la mision de Moisés, la pro
to públicamente, la liturgia se puso por escrito; mas teccion especial de Dios sobre su pueblo, la certeza
se habia recibido por tradicion de los apóstoles. En de las promesas que Dios le habia hecho. Debian,
las diferentes iglesias de Oriente y Occidente, en las pues, tener á los judios en guardia contra el error
lenguas griega, siriaca y latina se encontró con la ¿ de los demas pueblos, respecto á los dioses
misma en cuanto á su esencia. Si hubiera sido la obra
ocales, indígenas y nacionales, á los que ofrecian
de los hombres, se hubiera resentido del carácter y sus inciensos. Dios mismo ¿ por sus profetas
genio de cada nacion; no sabemos que se haya celebra que no ha prescrito á los judios esa multitud de cere
do ninguna asamblea para formarla. monias mas que para reprimir su inclinacion á la ido
Dios jamas ha dejado las ceremonias de su culto á latría. Ezeq. c. 22. y.5 y sig.; Jerem. c. 7, y . 22.
eleccion y discrecion de los hombres; tienen la mayor Estos mismos profetas repitieron muchas veces á los
c, onecsion con el dogma, con la moral y con el bien de judios que el culto ceremonial no puede agradar á
la sociedad. Los que las consideran como una cosa Dios sino en tanto que es la espresion de los senti
agena é indiferente para la religion no conocen ni su mientos del corazon. ¿En qué sentido se llamará su
origen ni sus consecuencias. persticion á las ceremonias que Dios habia prescrito
Una ceremonia que era santa y respetable cuando para evitarla supersticion?
se empleaba en el culto del verdadero Dios, se hizo En el cristianismo las ceremonias tienen un objeto
supersticiosa y criminal cuando se usaba para hon todavia mas augusto y un sentido mas sublime; nos
rar las falsas divinidades. El hombre, despues de ha ponen continuamente á la vista un Dios santificador
berse forjado dioses segun su gusto, se hizo tambien de las almas, que por medio de Jesucristo, su Hijo,
un ceremonial segun su capricho. Para esto no tuvo ha rescatado á los hombres del pecado y de la conde
necesidad ni de las lecciones de los sacerdotes, ni del nacion; que por medio de gracias contínuas prevee á
consejo de los impostores, ni del ausilio de los falsos todas las necesidades de nuestra alma; que ha esta
inspirados; le bastó el seguir el instinto de las pasio blecido entre todos los hombres, de cualquiera nacion
 CER 392) CER
que sean, una sociedad religiosa universal, que llama proscrito, han llamado reforma á este rasgo de igno
mos comunion de los santos. rancia y temeridad. Otros dicen que son restos del
Asi, en el cristianismo, lo mismo que en las dos judaismo. ¿Cómo acordar entre sí todas estas acusa—
épocas anteriores, las ceremonias son : 1.” Un monu ciones? Se les ha hecho ver que nuestras ceremonias
mento de los hechos que prueban la divinidad de no son ni nuevas ni supersticiosas, sino tan antiguas
nuestra religion; celebramos en nuestras fiestas el en lo general como el cristianismo, que algunas son
nacimiento, los milagros, los padecimientos, la muer— tan antiguas como el mundo. ¿ la liturgia
te, la resurreccion de Jesucristo y la venida del Es— en el siglo IV, no se hizo mas que redactar por escri
píritu Santo; monumento tanto mas irrecusable cuan to lo que habia sido practicado en los tres siglos an
io que se remonta á la fecha misma de los aconte— teriores, porque el Apocalipsis nos manifiesta ya el
cimientos, y fue establecido por testigos oculares; plan de la liturgia tal como S. Justino la represenió en
2.º Es una profesion de fé de las verdades que Jesu— el siglo II, y S. Cirilo de Jerusalen en el IlI. Esto es
cristo nos ha enseñado, que marcha á la par de la lo que ha demostrado el abate Renaudot en los to
Sagrada Escritura y determina su sentido: las cero mos y 5 de la Perpetuidad de la Fé, y despues de
monias del bautismo nos enseñan la corrupcion de la él el P. Lebrun.
naturaleza humana por el pecado; las de la liturgia A la verdad, cuando un dogma católico ha sido ata
nos atestiguan la presencia real de Jesucristo; el sig cado por los hereges, la Iglesia ha hecho de él una
no de la cruz nos representa los misterios de la San— rofesion mas espresa en su culto, y ha multiplicado
tísima Trinidad, de la Encarnacion y de la Reden as fórmulas que espresaban. Asi, como el misterio
cion, etc. 3." Son otras tantas lecciones de moral que de la Santísima Trinidad fue atacado desde luego por
nos enseñan nuestros deberes, nos advierten las vir los gnósticos, los sabelianos, los arrianos, los mace
tudes que debemos practicar, y los vicios que tene— donianos, etc., la Iglesia, para atestiguar su fé á las
mos que evitar. El ceremonial del bautismo es un tres personas divinas, en todo ha adoptado el número
cuadro de las obligaciones del cristiano; el del ma— de tres; de aqui el Kyrie repetido tres veces en ho
trimonio un catecismo sobre los deberes mútuos de nor de cada una; el Trisagio, ó tres veces santo, la
los esposos: el de el orden una instruccion para los triple inmersion por el bautismo, la dorologia colo
sacerdotes: las bendiciones de la Iglesia nos predican cada al fin de cada salmo, etc. Los defensores de la
el reconocimiento y la sumision hácia Dios, el uso ortodoxia han opuesto á los arrianos los cánticos de
moderado de los bienes de este mundo, etc....º Nues - los fieles; á los pelagianos, las oraciones del oficio
tras ceremonias son unos lazos de las sociedades que divino; á los berengarios, la adoracion de la Eu
nos reunen al pie de los altares, que aprocsiman las caristia, etc. Por lo tanto la Iglesia, por medio de las
condiciones desiguales, que contribuyea á suavizar ceremonias, ha preservado á sus hijos del error; y
las costumbres y al reposo de la sociedad; el matri luego se nos dirá que esta profesion de fé es un ma
monio y el bautismo aseguran la conservacion y edu nantial de errores!....
cacion de los hijos, el estado y los derechos del ciuda Si los protestantes han declamado contra la litur
dano; las exequias á los difuntos se han establecido, gia, es porque veian en ella su condenacion, la pre
no solo para atestiguar el dogma de la resurreccion sencia real atestiguada por la adoracion, de la Euca
futura sino para seguridad de los vivos: es una pre ristía, por los términos que espresan la transubstan—
caucion contra las muertes clandestinas, y por con — cion, las nociones de ofrenda y de sacrificio, la
siguiente contra el homicidio; la penitencia y la con comunion bajo una sola especie, la invocacion de los
fesion previenen mas crímenes que las leyes penales; santos, las oraciones por los difuntos, la gerarquía,
la comunion nos coloca á todos en la misma mesa, &c. etc. ¿Qué hace la Iglesia en estas circunstancias? Lo
El orgullo de los grandes, el egoísmo filosófico detes que ha hecho en todos tiempos desde la pretendida
tan todos estos ritos destinados á humillarlos. reforma: hizo el culto de la Eucaristía mas pomposo,
Acerca de esta parte de la religion, en qué estra la invocacion de la Santísima Virgen y de los santos
vios no ha incurrido una falsa filosofia? mas frecuente, la liturgia mas cagestuosa. Es una
Algunos autores, cuyas intenciones eran puras profesion de fé que habla á los ojos, que hace distin
sin duda alguna, pero cuyos conocimientos eran muy guir á los mas ignorantes un pais protestante de otro
limilados, han creido que no habia en las ceremonias católico. No concebimos cómo los teólogos anglicanos
nada de moral ni de misterioso; que todas se funda— y otros pueden echar una ojeada sobre esos antiguos
han sobre razones físicas é históricas. Segun su opi— monumentos de la creencia de la Iglesia y perseve
nion, se emplea el incienso para echar los malos olo— rar en sus preocupaciones; hablan de ellos histórica
res, los cirios para disipar las tinieblas de la noche, mente como de una cosa indiferente, sin considerar
los diferentes gestos para hacer alusion á las palabras jamas sus consecueneias.
que se pronuncian, etc. Este es el sistema que siguió Las tres principales sectas protestantes no estan de
Dom Claudio Vert en su Esplicacion literal é histórica acuerdo acerca de las ceremonias que era preciso se
de las ceremonias de la Iglesia. II a sido refutado sóli— parar ó conservar; los calvinistas casi las han supri
damente por M. Languel y por el P. Lebrun en el pre mido todas; no han conservado mas que el bautismo
facio de su Esplicacion de las ceremonias de la misa. la cena, desterrando todos los ritos antiguos: los
Los protestantes mas osados dicen que las ceremo— uteranos han conservado algunas mas, y si hubiese
nias de la Iglesia son supersticiones nuevas, desco— estado en la mano de Lutero tendria mayor núme
nocidas á los primeros fieles, un manantial infalible ro; mas se vio obligado á ceder al frenesí de algunos
de errores para el pueblo, un efecto de la ambicion otros reformadores: asi escribia en 1528 á Guillermo
de los sacerdotes: por consiguiente las han quitado y Praw ºst, su amigo. Los anglicanos, Inas moderados,
*.
 - CER 308) CER
son los que menos se separaron de ellas; y esta es una candalosos, el horror á los escomulgados, etc. Dice
de las razones por que los calvinistas les echan en que el número de las ceremonias inventadas, en el si
cara algunos restos del papismo. Un escritor angli glo IV parecia ya escesivo á S. Agustin. Epist. 55
cano conviene en que no es facil fijar el punto hasta ad Januar. c. 19, núm. 35.
dónde era preciso elevar la reforma acerca de esta Somos deudores á este crítico de que reconocia
cuestion; el gusto y la fantasía fueron los que deci que la mayor parte de muestras ceremonias tuvieron
dieron acerca de esto. origen en el segundo y tercer siglo; por esto manifiesta
No obstante, un calvinista muy pertinaz conviene el yerro de los que han sostenido que eran abusos in
en que las ceremonias son útiles para confirmar lo troducidos en los siglos de ignorancia que siguieron á
ue se dice por los teólogos y para conocer el verda la irrupcion de los bárbaros. No era posible encontrar
¿ sentido de las espresiones equívocas é dudosas. mas pronto vestigios de nuestros ritos, porque nos
Hay algunas de ellas, dice, de las cuales se deduce quedan muy pocos monumentos del primer siglo, y
una consecuencia, tan natural y evidente que no se el apóstol S. Juan vivió hasta principios del segundo.
puede menos de admitirla. Esta confesion nos parece Opondremos á las conjeturas de Mosheim la adhe—
muy notable é importante. Basnage, Hist. de la Igle sion que las iglesias, fundadas por los apóstoles en
sia, l. 13, c. 6, S. 1. las diferentes partes del mundo, conservaban por las
Mosheim dice, como los calvinistas, que Jesucristo lecciones de sus fundadores, la profesion que hacen
no instituyó mas que dos ceremonias, el bautismo y los PP. mas antiguos de atenerse á lo que los após
la cena; si por estó entiende que Jesucristo no man loles habian establecido, y la imposibilidad de in
dó con un precepto terminante mas que estas dos troducir al mismo tiempo un uso nuevo en las igle
ceremonias, es una verdad; pero los apóstoles no sias de Egipto, de la Arabia, de la Siria, de la Persia,
practicaron ni mandaron mas? Dieron el Espíritu San del Asia menor, de la Grecia, de Italia, de las Ga
io por la imposicion de las manos; ordenaron sacer lias, de España y de las costas de Africa: durante
dotes y diáconos con el mismo rito. Santiago recomen las persecuciones del segundo y tercer siglo habia
dó la uncion de los enfermos y la confesion de los pe muy poca religion, entre las sociedades diferentes.
cados; S. Juan, en el Apocalipsis, trazó el plan de Quién se ha tomado el trabajo de recorrerlas para
una liturgia pomposa. Los obispos, sucesores de los introducir en ellas uniformemente una nueva prácti
apóstoles, no tuvieron como ellos una autoridad legis ca? Cómo en todas las iglesias, tan lejanas las unas
lativa, y abusaron de su poder estableciendo otras ee de las otras, cuyo lenguage, costumbres y preocupa—
remonias relativas á las circunstancias y á las necesi ciones no eran las mismas, no se ha encontrado algu
dades de la Iglesia? na que tuviera la constancia y buen espíritu de que
Mosheim no pone terminantemente en duda esta rer atenerse á lo que los apóstoles y discípulos inme
autoridad; él mismo confiesa que los apóstoles insti diatos habian arreglado? Hé aquí lo que era preciso
tuyeron muchas ceremonias, y que los progresos del esplicar primero.
cristianismo hicieron esta institucion necesaria; mas En los escritos de los PP. del segundo y tercer
él trata de hacer sospechosos los motivos que se pro siglo, en las obras de nuestros apologistas, lejos de
pusieron los sucesores de los apóstoles. Dice que en hallar ningun vestigio de condescendencia hácia las
el siglo II se establecieron muchas ceremonias nuevas: preocupaciones y hábitos de los judios ó de los paga—
1.", por condescendencia con los judios y los paga nos, vemos todo lo contrario, una afectacion marca
nos, que estaban acostumbrados á un culto esterior da por parte de estos escritores de atacar de frente
pomposo, y á fin de atraerlos mas facilmente al cris las ideas y nociones del paganismo y del judaismo, y
iianismo; 2.º, para refutar la acusacion de ateismo oponer á ellas las que los cristianos recibieron de Je
que los paganos hacian á los cristianos, , porque no sucristo y de los apóstoles. Se pueden comparar so—
veian en estos últimos ningun aparato de religion; bre este punto las apologias de S. Justino, de Ter
3.", porque de los judios se sacaron los términos de tuliano, de Minucio Felix, de Orígenes, etc. En ellas
pontífice, sacerdotes, levitas, sacrificio, altar , etc.; se verá si han tratado de contemporizar con las preo
..", á fin de imitar los misterios del paganismo, que cupaciones de sus adversarios, á fin de ganarlos, y
inspiraban respeto por la religion; 5.”, para confor si trataron de imitarlos en alguna cosa. Por una parte
marse al gustó de los orientales, que gustaban ense los protestantes nos objetan el silencio de estos es—
ñar de una manera simbólica y misteriosa; 6.", para critores relativamente álas ceremonias de que hablan
contemporizar las antiguas preocupaciones de los pro los autores del siglo IV; por otra suponen que fueron
sélitos judios y paganos. Hist. Crist. Proleg., e:, 2, aquellos doctores silenciosos, ó sus contemporáneos
S. 5, y sac. 2, S.36; Inst. maj. suec. 1", parte 2.º, quienes las establecieron; se han avergonzado de en
c..., S.7; His eccles. del siglo II, 2." parte, c., señar á los paganos lo que se hacia en la Iglesia
S. 1º y sig., etc. -
cristiana por condescendencia á ellos. -

Cree que en el siglo III el número de ceremonias Convenimos en el gusto general, no solo de los orien
sa aumentó tambien, porque los PP. de la Iglesia tales, sino de todos los pueblos del mundo, por la ma
adoptaron las ideas de Pitágoras y Platon relativa nera de enseñar simbólica y alegóricamente y por las
mente al poder de los demonios sobre el cuerpo y las ceremonias magestuosas é instructivas que encierran
almas; de aqui nacieron, segun él, los exorcismos y un gran sentido. De esto mismo deducimos que Je
los demas ritos del bautis no, las bendiciones de los sucristo, os apóstoles y sus discípulos eran demasia
alimentos y de las demas cosas usuales, la estima do sabios para quitar á los hombres un medio tan
cion por las mortificaciones y la continencia, las poderoso de instruccion. Estos símbolos, dicen nues
penitencias rigorosas impuestas á los pecadores es iros adversarios, y este aparato esterior agradan á los
 CER 39%) CER
ignorantes; esto es verdad, y en esto son mas sen gria que reinaban en las fiestas de los paganos, per
satos que los pretendidos sabios que los desdeñan y mitió á los cristianos el recrearse y regocijarse en las
quieren suprimirlos. No trataron Jesucristo y los após fiestas de los mártires, esperando que por sí mismos
toles de instruir y convertir mas que á filósofos? volvieran á una conducla mas grave y honrada. De
En cuanto á la doctrina de los pitagóricos y de los aqui deduce Mosheim que S. Gregorio permitió á los
platónicos del siglo III, Mosheim podia remontarse cristianos bailar, jugar y celebrar festines sobre las
imas; la habria visto en los escritos de los apóstoles y tumbas de los mártires el dia de su fiesta, y practi
de los evangelistas. Nos enseñan que el demonio se car todo lo que los paganos hacian en sus templos en
atrevió á tentar á Jesucristo mismo; que atormenta honor de sus dioses. Hist. eccles. del segundo siglo, se
ba á los poseidos curados por Jesucristo, y que in gunda parte, c., S. 2. Si esto es cierto, S. Grego—
trodujo en el corazon de Judas el entregar á su Maes rio Taumaturgo permitió tambien á los cristianos los
tro. Dicen que este espíritu maligno roba la palabra espectáculos del teatro, la embriaguez y la prostitu
de Dios del corazon de los que la escuchan; , que an eion, puesto que los paganos hacian todo esto en
da al rededor de nosotros como un leon furioso; que sus templos en honor de sus dioses. Es pues imposible
nos tiende emboscadas; que es preciso resistirle y recrearse y regocijarse de una manera honrosa y sin
onerle en fuga, etc. Estas verdades bastaban sin ningun peligro para las costumbres? Hé aqui cómo
uda para instituir exorcismos y bendiciones, para con los comentarios maliciosos los protestantes ca
inspirar á los cristianos la estimacion á la mortifica lumnian á los PP. de la Iglesia.
cion, á la continencia, á la castidad y á la peniten No responderemos nada á la inculpacion que hace
cia, sin que hubiese necesidad de consultar á Pilágo á los obispos de los siglos siguientes de haber multi
ras y Platon. Presumimos que los PP. y los cris plicado de nuevo las ceremonias por un motivo de
tianos del segundo y tercer siglo formaron su creen ambicion, á fin de atraerse mas consideraciones y
cia sobre los libro del nuevo Testamento, mas bien respetes por parte de los pueblos, Nada cuesta á la
que sobre la doctrina de los filósofos paganos. Al malignidad de nuestros adversarios el prestar mo—
gunos de nuestros inerédulos han dicho que los ecléc tivos viciosos á los que por otra parte los tienen muy
ticos ó nuevos platónicos, habian imaginado su laudables.
teurgia sobre el modelo de las ceremonias cristia Nuestros filósofos incrédulos no podian dejar de so
nas; otros que los cristianos imitaron esta teurgia; brepujar las calumnias de los hereges; pero no han
sin duda fué Mosheim quien les ha sugerido esta idea; hecho mas que seguir el camino que estos trazaron.
se le , debe felicitar de los discípulos que ha Dicen que un culto tan cargado de ceremonias y prác
formado. ticas esteriores como el nuestro no es la adoracion
El ha debido ver del mismo modo en los escritos en espíritu y en verdad que Jesucristo vino á esta
ds los apóstoles los nombres de pontífice, de sacerdo blecer, que se asemeja mucho al judaismo, que solo
te, de sacerdocio, de altar, de sacrificio, de vícti conviene al pueblo mas grosero. Nosotros responde
ma, etc. A él le tocaba probar que los prelados de la mos que el culto en espíritu y en verdad es el que es—
Iglesia abusaron de ellas en el segundo ó tercer siglo, tá profundamente grabado en el entendimiento y en
para cambiar la verdadera nocion de le Eucaristia, el corazon, no verificándose sino por el intermedio
ara abrogarse facultades, derechos y privilegios, á de los sentidos. El de los judios se limitaba al esterior;
os cuales no hubieran debido aspirar. no les inspiraba ni respeto, ni reconocimiento, ni su
Dice que las personas sensalas y virtuosas se indig mision á Dios, ni caridad para con sus hermanos; es
naron de la multiplicacion de las eeremonias, y cita el to es lo que les reprochaba Jesucristo. Todo bombre,
libro de Tertuliano de Creatione; no se encuentra es— filósofo ú otra cosa, que no quiere esterioridades de
te pretendido libro entre los escritos de Tertuliano; religion tiene mucho adelanto para abjurar sus sen
alega aun con mas infidelidad el tesiimonio de san timientos. Si Jesucristo hubiese abolido el cullo es
Agustin. Este santo doctor habla de las ceremonias terior, habria venido á hacer á los hombres ateos é
que no estan fundadas ni en la autoridad de la Sa— incrédulos.
grada Escritura, ni en los decretos de los concilios, Objetan que las ceremonias son un lazo de error
nien el uso de la Iglesia universal, sino que varian se ara el pueblo que pone en ellas su confianza; les atri
un los diferentes lugares, de manera que no se pue ¿ la virtud de purificar el alma, y tiene mas celo
en descubrir las causas de su institucion; es de opi en cumplirlas que en llenar los deberes esenciales
nion que se quiten todas; dice que el yugo de los ri de la moral. Aun cuando este abuso fuera cierto,
tOS ¿ es mas favorable que el de las invencio probaria la torpeza y estupidez del hombre y no el
nes de la presuncion humana, Mas dice que no se de. peligro de las ceremonias. De dos males seria preciso
ben rechazar ni vituperar, sino mas bien alabar é elegir el menor: pues bien, es menos malo que el
mitar las prácticas en las cuales se ven los caracte pueblo abuse á veces de las esterioridades de la reli
res opuesto, y que no son contrarias ni á la fé ni á gion, que si perdiera todo sentimiento de ella. Es un
las buenas costumbres, sino que pueden servir para absurdo el decir que las ceremonias son hechas para
la edificacion. Epist. 55. ad Januar., c. 18 y 19, el pueblo y que son para él un lazo inevitable de er
n. 34. y 35. Hé aqui una doctrina muy diferente de ror; es suponer que ha nacido para ser engañado.
la de Mosheim y de los protestantes. Pero el pueblo devuelve á los filósofos el desprecio en
. Por último, alega, en tercer lugar, un rasgo de la que ellos le tienen; en despecho de su sabiduria su
vida de S. Gregorio Taumaturgo, en la cual dice que blime el pueblo conoce muy bien que la piedad con
viendo á la multitud ignorante perseverar en la ido— siste no en los gestos sino en los sentimientos, de la
latria á causa de los placeres sensuales y de la ale misma suerte que la humanidad consiste en las afec
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ciones y servicios y no en las esterioridades de la ur ley de Moisés que querian sujetar á ella á los gen
banidad. tiles; que les parecíó mal que S. Pedro instruyera
Otros mas pertinaces sostuvieron que nuestras ce bautizara al centurion Cornelio; que alteraron lá
remonias son un resto del paganismo, que no hay la Iglesia de Antioquía por su obstinacion en guardar
menor diferencia entre los ritos del cristianismo y la las ceremonias legales; que difamaban al apostol San
teurgia de los paganos. Es una objecion antigua de Pablo porque ecsimia de estas ceremonias á los que
los maniqueos. S. Agustin, contra Faustum, l. 20, no eran judios de nacimiento; mas parece que en es
c. y 21. Nosotros sostenemos, por el contrario, que to S. Epifanio confundióá los cerintianos con los ebio—
el uso de las ceremonias en el culto del verdadero nilaS.
Dios es la restitucion de un robo hecho por los pa Es mas natural referirse á S. Ireneo que es mas
ganos. La verdadera religion es mas antigua que las antiguo. Segun lo que dice, Cerinto no apareció hasta
falsas, tiene derecho á reivindicar los ritos que sus el reinado de Domiciano, hácia el año 88, y fue co—
rivales han prolanado. ¿Debemos abstenernos de ro nocido del apostol S. Juan, que escribió su Evangelio
gar á Dios, porque los paganos suplicaron á Júpiter para refutarle.
y á Venus, y no ponernos de rodillas, porque se pros Cerinto, conformecon las ideas de Platon, creia que
ternaron delante de los ídolos? Dios no habia creado el universo inmediatamente por
Los protestantes mismos conservaron de las cere sí mismo, sino que habia producido espíritus, inteli
monias las reuniones de religion y el canto, el bau encias ó genios mas ó menos perfectos los unos que
tismo, que es una purificacionó una lustracion, la os otros; que uno de ellos habia sido el artífice del
cena, que es una comida religiosa, las fiestas, los mundo; que todos le gobernaban, y administraba
ayunos solemnes, la imposicion, de las manos, las cada uno una porcion de él. Pretendia que el Dios de
exequiasálos difuntos; se ponen de rodillas para orar, los judios era uno de estos espíritus ó genios, que era
algunos hacen la señal de la cruz : los paganos ob el autor de su ley y de los diversos acontecimientos
servaron casi todos estos ritos; acaso son restos del que les sobrevinieron. No queria que se aboliese en—
paganismo? teramente esta ley; juzgaba que era preciso conser—
Cuando se nos dice que nuestro culto esterior es un var muchas cosas en el cristianismo.
resto del judaismo, respondemos que el judaismo Decia que Jesus habia nacido de José y de Maria co
mismo era un resto de la religion de los patriarcas, mo los demas hombres; pero que estaba dotado de una
que este databa de Adan y de Dios que se la habia sabiduria y de una santidad muy superiores; que en
enseñado. el momento de su bautismo, Cristo el Hijo de Dios,
Ecsiste la misma semejanza entre la teurgia pagana habia bajado sobre él en forma de paloma, le habia
y el culto de la Iglesia, que entre la impiedad y la revelado Dios Padre, hasta entonces desconocido, á
religion. Un teurgista pretendia, por medio de los ri fin de que le diera á conocer á los hombres, y le dió
tos que inventó, obligar á los genios ó demonios que poder ¿ hacer milagros; que en el momento de la pa
adoraba á hacer milagros, á manifestarle el porve sion de Jesus, Cristo se habia separado de él para vol
nir, etc. Un sacerdole usa, no las cerenonias de que ver al lado del Padre, que solo Jesus padeció, murió
él es autor, sino las que Dios mismo ha instituido; lejos y habia resucitado; pero que Cristo, puro espíritu, era
de mandar á Dios, sabe que este Señor le prohi incapaz de padecer. Estos errores son los mismos que
be poner nada suyo; no pide á Dios milagros, y me los de Carpócrates; mas parece que los discípulos de
nos todavia conocimientos proféticos, sino las gra Cerinto añadieron otros despues.
cias que Dios prometió á los fieles. Se cree tambien que fue el autor de la heregía de
Por último, los que dicen que las ceremonias fue los milenarios, que suponia que al fin del mundo Je—
ron establecidas por el interés de los sacerdotes, se suscrito volveria sobre la tierra para egercer en ella
persuaden, sin duda, que en los cuatro primeros siglos sobre los justos un reino temporal por espacio de mil
de la Iglesia habia ya derechos eventuales adheridos años; que durante este intérvalo los santos gozarian
á cada una de las funciones del sacerdocio. No saben, aqui abajo de todos los deleites sensuales. Esto es lo
ú olvidan que estos derechos no empezaron á es que dió lugar á algunos antiguos para atribuir á Ce
tablecerse sino en el siglo X ó despues; cuando rinto el libro del Apocalipsis en el cual querian encon—
el clero fue despojado de sus posesiones por los seño trar este pretendido reino de mil años; otros creyeron
res que se apoderaron de ellas. Asi es como la igno ue Cerinto habia compuesto un Apocalipsis diferente
rancia decide de todo sin reflecsion. Véase CULTo, Ll ¿ de S. Juan y habia enseñado en él este delirio.
TURGIA, SUPERSTICION, TEURGIA. Es muy esencial el observar que Papias y los otros
PP. antiguos, que tambien admitieron un reino tem
Ceremon las judáicas. Véase Levítico, poral de Jesucristo por espacio de mil años, jamas lo
LEYEs CEREMoNIALEs. concibieron como Cerinto; nunca creyeron que lós
santos gustarian sobre la tierra de deleites sensuales,
Cerintianos. Hereges del primero y segundo sino de delicias puramente espirituales, segun con
siglo. Su gefe fue Cerinto, judiodenacion ¿ religion, vienen á cuerpos resucitados, gloriosos, esentos de las
que despues de haber estudiado la filosofia en la es— necesidades de la naturaleza. Los incrédulos que han
cuela de Alejandria, se presentó en la Palestina atribuido á los antiguos PP. el milenarismo de Cerinto
y esparció sus errores, principalmente por el Asia trataron de engañar á los ignorantes. V. MiLENARios,
ImenOT.
Las opiniones de este herege dan lugará observa
Algunos antiguos, en especial S. Epifanio, creye ciones importantes, 1.” Hé aquí un filósofo formado
ron que Cerinto era uno de esos judios celosos por la en la escuela de Platon, que lejos de admitir en Dios
-
 UER 306 CER

una trinidad, no admitesiquiera una dualidad, ni su plan seguido y un sistema razonado de los errores de
pone al Hijo de Dios igual á su Padre, sino que le con Cerinto; mas creemos que hace muy poco honor á es
sidera como una criatura: cómo se han atrevido losan te herege y á los demas sectarios del siglo II, por
titrinitarios á sostener que el misterio de la Trinidad que está probado que eran muy malos razonado
era un dogma procedente de la escuela de Platon? res. No puede persuadirse que Cerinto haya dicho
Cuando se conocen los principios de este filósofo, se que los deleites sensuales la lugar en el reino de
convence uno de que jamas pensó en suponer una Jesucristo sobre la tierra por espacio de mil años. ¿Có
trinidad en Dios. mo este doctor, dice, habria podido caer en esta idea
2.º Cerinto no se dejó subyugar por los apóstoles, grosera cuando daba testimonio de la santidad emi
fue su adversario; no obstante, lejos de atacar el tes nente y de las virtudes sublimes de Jesucristo? Pero
timonio que dieron de los milagros de Jesucristo y de ademas de que no era ningun absurdo el suponer que
su resurreccion, le confirmó; conviene en estos hechos Dios no exigia de los justos una vida tan pura y tan
esenciales, trata de dar razon de ellos por el poder santa como la de Jesucristo, no basta una simple pro l
sobrenatural comunicado áJesus. Querrán todavía de babilidad para acusar á los PP. de haber querido ha
cir los incrédulos que estos hechos nº, fueron creidos cer á Cerinto odioso, á fin de separar á los fieles del
sino mucho tiempo despues, cuandonó se podian com error de los milenarios, del cual era autor. Esta sos—
probar, y por hombres sencillos é ignorantes, que no pecha no se aviene bien con la pretension de los de
se tomaban el trabajo de ecsaminarlos? mas protestantes, que dicen qué todos los PP. de los
3." Es preciso que Jesucristo haya enseñado cla primeros siglos propendian á este error.
ra y terminantemente que era el Hijo de Dios; si no
se trataba mas que de una filiacion metafórica y por * Certidumbre. En todos los tiempos, dice el
adopcion, Cerinto no hubiera hecho mal en entender P. Perrone, aquellos que se entregaron á los estudios
lo segun lo hizo; sin embargo, fue mirado como here filosóficos con conciencia de lo que hacian, debieron
ge y refutado por S. Juan... ¿Con qué cara los socinia reconocer, con todo el género humano, ciertas ver
nos y sus adictos, Loke, Bury, etc., se atrevieron á dades primitivas de hecho y de razon, á las cuales
sostener que para ser cristiano bastaba creer que Je no se puede hacer el asentimiento sin combatir la
sucristo era el Mesias, el enviado de Dios; que el título parte razonable de su propia naturaleza, y á las cua
de Hijo de Dios no significa otra cosa, etc.? les los mismos escépticos, sin conocerlo, rinden ne—
No podemos dudar que S. Juan compusiera su cesariamente homenaje, pues que el acto mismo por
Evangelio para refutar á Cerinto, como dice S. Ire— el cual las niegan, las presupone y las atestigua. Asi,
neo, l. 3, c. 11. El apostol ataca de frente á este he en todos tiempos se ha admitido como indudable y
rege al empezar su narracion. Dice: Al principio era cierto el hecho de la conciencia, que nos revela nues
el Verbo, él estaba en Dios, y él era Dios.... todo ha tra propia existencia y las modificaciones interiores
de nuestro ser. Nullus erravit unquam in hoc quod
sido hecho por él, y nada ha sidohecho sin él. Es, pues,
un error el enseñar, como Cerinto, que el criador del
non preciperet se vivere, dice Sto. Tomás. (De ve
mundo no es Dios mismo, sino una virtud, una inte— rit. X, VIII). En todos tiempos se han admitido como
ligencia, un espíritu distinto de Dios, inferior á Dios, indudables y ciertos estos primeros principios de ra
y que no conocia á Dios, S. Ireneo, l. 1, c. 26. Segun zon, base de este raciocinio, llamados por esto mis
S. Juan este Verbo era la vida y la luz de todos los mo conceptiones communes, y que, con las verdades
hombres; no ha dejado de ilustrarlos aunque no fuese de un aserto facil que de ellas se desprenden, forman
conocido; siempre ha estado en el mundo, y ha veni lo que se llama sentido comun de los hombres. Inte
co como á su propio dominio, aunque no haya queri llectus in primis principiis non errat. (Santo To
do recibirle. Ño es, pues, cierto que el mundo haya si más C. Gentes, 1, LVIII. Intellectus semper estrectus
do gobernado por genios subalternos, por espíritus secundum quod intellectus est principiorum. (1, p.9,
creados, como decian Cerinto y Carpócrates, el mismo 17, art. 3, etc.) Con mucha felicidad el cardenai Pa
Verbo fue el que se hizo carne, que vivié y conversó llavicini (del Bene, l. 2), llama á estas primeras ver
con los hombres, y es el Hijo único del pi, él mis dades antorchas encendidas por la naturaleza para
mo fue el que nos le dió áconocer. Es, pues, falso que ilustrar las primeras proposiciones oscuras. No solo h
Jesus y Cristo sean dos personages diferentes, etc. elhombre esiá cierto de estas verdades primitivas, sino
S. Juan no declama con menos fuerza contra estos que sabe tambien que lo está. Esto no puede depender
mismos errores en sus cartas; trata de antecristoáaquel sino de la evidencia intelectual, que es producida en
¿ dice que Jesus no es Cristo, Joan. c. 2 y.22; que él por la necesidad intrínseca y lógica de esta clase de
ivide á Jesus, c., y. 3; el que no cree que Jesus es verdades: por esta evidencia el hombre entiende
el Hijo de Dios, c. 5, y. 10; el que no confiesa que Je y sabe que es imposible pensar lo contrario; en
sucristo vino en su propia carne, II Joan... y.7, etc. otros términos, vé la imposibilidad de lo contrario, de
Ya veremos en otra parte que este apostol no refuta suerte que no puede reusar su asentimiento á estas
menos claramente á los ebionitas, otros hereges con verdades, y no puede dudar de ellas sin renegar de
temporáneos de los apóstoles. sí mismo. Santo Tomás comprendió perfectamente
No parece que subsistió por mucho tiempo la secta este caracter de la evidencia intelectual, cuando la
de los cerintianos; no se trata de ella desde Orígenes; hace consistir en que el hombre ve imposibile esse
probablemente se refundiria en alguna de las otras (rem) se aliter habere; lo que se aplica al principio
sectas del siglo II. de identidad, lo que es, es, ó al de contradiccion, una
Mosheim, Hist., Christ., saec. 1, S. 70 é Instit. misma cosa no puede ser y dejar de ser al mismo tiem
maj. 2" part, c. 5, S. 16, se ha dedicado á dar un po. Estos dos principios de razon, asi como todos los
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demas, se resuelven en último análisis, en la idea Se podrá decir que hay delirios de imaginacion
única y perfectamente simple del Ser, segun la obser que hacen sobre nosotros la misma impresion que
vacion del mismo Sto. Tomás. (9 de Verit. 1); Illud los hechos reales; que muchas personas sanas se han
autem quod primo intellectus concipit quasi notissi creido enfermas; que muchos enfermos se creen cura.
mum, et in quo omnes conceptiones resolvit, est Ens.dos sin serlo; á nadie ha sucedido soñar treinta y
Que si la suprema razon lógica de la verdad, el cri ocho años que estaba paralítico, ó creer que andaba
terio, segun el cual (secundum quod) nosotros juz cuando estaba en la imposibilidad de moverse. Se
gamos, aquel al cual debe referirse en último análi tratará de probarnos que nunca estamos absoluta
sis toda certidumbre, no puede ser múltiple; no su mente ciertos de nuestro estado sano ó enfermo, im
cede asi para el criterio que la escuela llama per potente ó válido?
uod, porque este criterio varía; en otros términos: 2.º, Los que habian visto á este paralítico por es
¿ muchas fuentes de la verdad, muchos medios na pacio de treinta y ocho años, que habian ayudado
turales que conducen á la certidumbre, de la misma á llevarle y moverle, que le veian despues añdar y
suerte que hay muchos objetos de nuestros conocimien llevar su cama, estaban por el testimonio de sus sen
tos, y como pueden venirnos de la sensibilidad esterna tidos físicamente ciertos de estos mismos hechos. No
ó del sentimiento íntimo ó de la razon bajo la cual se podia haber lugará la ilusion nien ellos nien el mismo
comprende tambien el sentido comun de los hombres, enfermo. Un hombre no puede engañar á los ojos de
ó por último de la autoridad, nosotros encontramos todos, por espacio de treinta y ocho años, con una
en ellos otros tantos medios que, empleados á tiempo paralisis fingida; los ojos de una multitud de hombres
y segun las reglas de una sana logica, nos hacen lle no pueden ser fascinados hasta el punto de hacerles
gará la verdad y certidumbre. De lo que se deduce creer que un hombre anda y obra mientras que está
tambien que para llegar al fin el verdadero filósofo inmóvil, ó de hacerles tener á todos por un mismo
no debe limitárse á beber en una sola de estas fuen hombre dos hombres diferentes. ¿A dónde iriamos á
tes con esclusion de las demas, sino que debe recurrir parar? ¿Podria subsistir la sociedad si el testimonio
á todas y consultarlas con cuidado: hé aquí porqué de nuestros ojos, sobre hechos tan palpables, no fue
se ha mirado siempre como cierto é incontestable ra físicamente cierto y pudiera inducirnos á error?
que los solos datos suministrados por la esperiencia Por un momento se nos puede sorprender con di
no pueden conducirnos á la ciencia, sino mas bien á sertaciones sobre los artificios de los malvados, sobre
un empirismo puro, y que por otra parte, los puros los prestigios de los jugadores de manos, sobre la se
conceptos de razon no pueden por sí solos proporcio mejanza de los rostros , etc. Sin el menor esfuerzo de
narnos mas que nn mundo, ideal. Uniendo la obser lógica conocemos que los prestigios no pueden impo
vacion y el raciocinio, los datos de la esperiencia y nernos hasta el punto de hacernos dudar si un hombre,
los principios de razon, el elemento empírico y el ra con el cual vivimos habitualmente, es siempre el
cional en la unidad del sugeto que siente y entiende, mismo y no otro.
es como la ciencia verdadera, real y objetiva del Estos testigos oculares estaban pues seguros del
hombre es constituida. milagro por el mismo raciocinio evidente que hacia
Dejamos á los filósofos el cuidado de distinguir las el paralítico.
diferentes especies de certidumbre, establecer sus ..º El testimonio reunido de esta multitud de
reglas, y el de responderá las objeciones de los es testigos oculares daba á los que no habian visto el
cépticos y pirronianos. La única cuestion que atañe di milagro ni al paralítico una certidumbre moral com
rectamente á los teólogos es la de saber si las reglas pleta de estos mismos hechos. Conocian que un gran
de certidumbre son aplicables á los hechos sobrenatu número de testigos, que no tenian ninguna parte ni
rales como á los demas; si podemos estar tan seguros ningun interés en este milagro, no podian haber for
de un milagro como lo estamos de un hecho natural; mado entre sí el complot de engañar á sus conciuda—
si las mismas pruebas que bastan para convencernos danos, por solo el placer de mentir; que no todos
del uno son suficientes para hacernos creer el otro. podian tener los ojos fascinados y el entendimiento ,
Apesar de la multitud de sofismas, con los cuales oseido del mismo delirio; que la sencillez, la uni
los incrédulos han embrollado esta cuestion, nos pa ormidad , la constancia de su testimonio era una
rece evidente: 1.º que por el sentimiento interior , un prueba irrecusable contra la cual se encontraba des
hombre sensato puede estar metafísicamente cierto de armado el pirronismo.
un milagro obrado sobre sí mismo, tener tanta cer Si la deposicion de los testigos oculares ha dado á
teza de él como de su propia existencia. El paralí los contemporáneos una certidumbre moral del mila
tico de treinta y ocho años curado por Jesucristo te gro, este mismo testimonio, puesto por escrito á la
nia esa certidumbre metafísica de la impotencia en la vista de los contemporáneos y trasmitido á las gene
cual habia estado de andar y moverse, del poder que raciones futuras por una historia que siempre ha sido
habia recibido de Jesucristó, y del que actualmente leida, conocida y mirada como incontestable, nos da
hacia uso, del tránsito repentino que habia hecho del del hecho la misma certidumbre que tenemos de todos
primero de estos estados al segundo sin remedios, sin los demas hechos pasados, tanto naturales como so
brenaturales.
preparativos, sin haber él contribuido para nada:
aqui no puede tener lugar la ilusion. Que éste trán Seria un absurdo el sostener que un hecho metafí
sito ó cambio fuese sobrenatural y milagroso es una sicamente cierto para el que le esperimenta, física
consecuencia evidente que podia deducir, sin temor mente cierto para los e", ven, moralmente cierto
, de ser engañado; no es necesario ser filósofo, médico para los ¿ lo conocen por los testigos oculares, no
ó naturalista para conocerlo. " puede serlo para las generaciones futuras ; lo sobre
TOMO 1. 50
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natural del hecho no puede influir mas sobre la mar la certidumbre fisica para los que le ven; luego es
racion de los historiadores, que sobre los ojos de los tambien susceptible ¿ la certidumbre moral para
que lo ven, y sobre el sentimiento interior del que le aquellos á quienes se refiere, ya de viva voz, ya por
esperimenta. - escrito, y principalmente cuando está tambien pro
No obstante, esta tesis se ha sostenido en nuestros bado por los efectos, de los cuales no se puede dudar.
dias con toda la gravedad y filosofia posibles. Se ha Nos parece que acerca de esta cuestion los incré
escrito y repetido mas de una vez que en orden á mi dulos cónfunden dos cosas muy diferentes: la repug
lagros ningun testimonio es admisible; que el amorá nancia que tienen para creer un hecho sobre natural
lo maravilloso, la varidad de haber visto un prodi con la incertidumbre del mismo hecho. Mas si la cer
gio y poderle contar, el fanatismo de religion, la cre tidumbre de los hechos disminuyera á proporcion del
dulidad del pueblo en este género hacen sospechosa rado de perlinacia de los incrédulos, no habria na
toda aseveracion: que en el momento que se trata de cierto en el mundo. Proponedles un hecho natural
religion no se puede contar con la sinceridad, el dis inaudito que suceda por la primera vez, pero que les
cernimiento y el buen sentido de ningun testigo. Es sea indiferente, lo creen sin dificultad desdé él mo—
como si se dijera que nadie es creible en el universo mento que esté probado. Referidles otro hecho natu
mas que los áleos é incrédulos. ral revestido de las mismas pruebas, pero que cho
Por la misma razon hubiera sido tambien necesario que á sus opiniones y sistema , se opondrán á cada
sostener que, con respecto á un hecho sobrenatural, una de las pruebas y sostendrán que no es cierto. Si
todos los sentidos nos engañan, y el sentimiento inte se trata de un hecho sobrenatural probado todavia
rior es defectuoso; que aun cuando un hombre hu mejor, le rechazan sin exámen; declaran que aun
biese esperimentado sobre sí mismo un milagro, no que le vieran no le creerian.
podria saberlo ni estar cierto de él. Es una lástima Estoy mas seguro-, decia uno de ellos, de mi juicio
que no haya llegado todavia la filosofia hasta ese que de mis ojos. Y yo os digo que estais mas seguros
punto. de vuestros ojos que de vuestro juicio. Habes sido
Los teólogos han respondido que si los hombres cristiano por espacio de una buena parte de vuestra
fuesen tales como dicen los incrédulos, seria muy vida: luego juzgábais que el cristianismo está proba
sorprendente que no se vieran todos los dias aparecer do. Habeis renunciado á él para abrazar el deismo:
milagros; la vanidad y la perversidad en algunos, la luego habeis estado persuadidos de que vuestro juicio
eredulidad y el entusiasmo en olros, no dejarian de os habia engañado sobre veinte cuestiones. Despues
acreditarlos, y no obstante son muy raros; cuando de haber sostenido el deismo con todas vuestras fuer
se publican nó vemos que produzcan ciertos efectos; zas, habeis pasado el ateismo y al materialismo: lue
los que se encomiaron á principios de este siglo, no go habeis reconocido que vuestro juicio era falso lam
han tenido un gran número de partidarios. bien sobre todas las pretendidas pruebas del deismo.
Mas, ó los incrédulos toman su revancha, ó quie— Contad, os ruego , de cuántos errores los encontrais
ren dárnosla. Que los hombres sean ávidos de mila culpables. Citadne una sola ocasion en la cual vues
gros favorables á las opiniones que hayan abrazado, tros ojos os hayan engañado sobre un objeto que esté
á la religion en que hayan nacido, se concibe bien; á su¿" por ejemplo, sobre la identidad de un
mas que sean inclinados á forjar ó creer prodigios con personage con el que hayais vivido habitualmente.
trarios á sus preocupaciones y á su persuasion, es una Esta misma máxima, Estoy mas seguro de mi juicio
paradoja absurda. que de mis ojos, es la demostracion complela de la
Tratad, si podeis, de persuadir á un católico que falsedad de vuestro juicio.
los hereges hacen milagros, á un protestante que los Otra cuestion es la de saber si en punto á milagros
hay en la Iglesia romana, á un judio ó á un turco la certidumbre moral completa y bien establecida no
que hay taumaturgos entre los cristianos, y vereis si debe prevalecerá la pretendida certidumbre física, que
el amor á lo maravilloso, el entusiasmo y la creduli no es mas que una esperiencia negativa ó mas bien
dad hacen mucho efecto sobre estas gentes. una pura ignorancia. Nuestros filósofos modernos lo
Los judios, aferrados en sus preocupaciones y es— han dicho, y no se puede abusar de los términos de
peranzas, no estaban muy dispuestos á recibir mila una manera mas repugnante. Tenemos, dicen, una
gros obrados para desengañarlos; hacian lo mismo certidumbre física absoluta, una esperiencia infalible
que nuestros incrédulos; para creer en los milagros de la constancia del curso de la naturaleza, pues
querian verlos: cuando lo veian lo atribuian al espí que estamos convencidos de él por el testimonio de d
ritu de las tinieblas. Los paganos, prevenidos con un nuestros sentidos; asi es como sabemos que el sol sal
profundo desprecio hacia los judios, no se encon drá mañana, que el fuego consume la madera, que
traban muy inclinados á creer que estos obraban un hombre no puede andar sobre las aguas, que un
milagros para probar la falsedad del paganismo, y muerto no vuelve á la vida, etc. La certidumbre mo
esponerse á mayor peligro admitiéndolos. Sin embar ral llevada al mas alto grado no puede prevalecer so
go, unos y otros cedieron á la evidencia de esta prue bre una certidumbre física en la cual estamos obliga
ba, y muchos derramaron su sangre para confirmar— á descansar en todas las circunstancias de nuestra
la. La vanidad, la perversidad, el amor á lo mara W (ld.
villoso, la credulidad, el fanatismo acostumbran ir
tan lejos? se Algunas reflexiones bastan para demostrar la fal—
de este argumento. 1." Es falso que el testimo
llé aqui, pues, un raciocinio al cual los incrédulos nio de nuestros sentidos nos suministre una certidum
no responderán jamás : un milagro es susceptible de bre absoluta de la constancia del curso de la natura
la certidumbre metafísica para los que le conocen, de leza, si no admitimos una providencia. Los materia-”
 CES 399 CES
listas que tambien la niegan, sostienen gravemente Chima. Aquellos filósofos de nuestros días que
que no estamos seguros si el curso de la naturaleza ha no piensan mas que en contradecir en un todo la his—
sido siempre y será tal como es; si de aqui á pocos toria santa, han creido encontrar en la China monu
momentos el universo no volverá á caer en el caos; si mentos propios para echar abajo nuestra creencia;
no nacerá de sus ruinas un nuevo orden de cosas y mas la mayor parte de los hechos que han aventu--
generaciones que no tendrán nada de comun con las rado son falsos.
que conocemos, etc. Solo, pues, sobre la sabiduría y 1.º Dicen que la historia de la China es mas an
bondad de la Providencia es en lo que descansamos ligua ¿ el diluvio, del cual no hace mencion, que
con respecto á la constancia de las leyes que ha esta llega hasta una época mas antigua que la creación;
blecido; sabemos que no las derogará sin razon y sin ¿ no obstante, esta historia es muy auténtica, re
advertírnoslas; mas cómo estamos seguros de que se actada por escritores públicos y, contemporáneos á
ha quitado á sí misma el derecho de suspender su los acontecimientos; que está fundada sobre observa
curso por algunos momentos para un bien mayor, ciones astronómicas y sobre el cálculo de los eclipses,
que no lo ha hecho nunca ni lo hará? ¿Qué certi de los cuales se observó uno 2155 años antes de nues
dumbre pueden suministrarnos nuestros sentidos y tra era.
nuestra pretendida esperiencia sobre este punto? Lo cierto es que el primer compilador de la histo
2." Si fuera una verdadera certidumbre física, fir ria china es Confucio, que vivió 550 años antes de
me é invencible, se deduciria que el que es testigo Jesucristo, y que los chinos no tienen ningun libro
ocular de un milagro no debe creer en él ni fiarse del mas antiguo. Este filósofo no pudo remontarse mas
testimonio de sus ojos; que el mismo que esperimenta que doscientos años antes de él por datos seguros; y
una curacion , milagrosa no puede atenerse al sen hasta ahora los sábios no han podido avenirse acerca
timiento interior que se la atestigua. ¿Llevarán la del año ó siglo en el cual es preciso colocar el eclipse
pertinacia hasta ese punto nuestros escépticos obsti tan antiguo de que se nos habla. Por el modo con que
nados ? Raciocinando como ellos, un negro está en Confucio hace mencion de él, no se puede saber si fue
derecho de negar absolutamente todo lo que se le de sol ó de una. Los historiadores posteriores á Con—
dice del hielo sobre el cual puede andar un hombre; fucio son los que han emprendido el remontarse á una
los que han oido hablar del renacimiento de las ca época mas antigua que él, y fijan los datos que no pu
bezas de los caracoles por la primera vez, se funda— do determinar.
rian bien si trataran de impostores á los fisicos que Cuanto mas recientes son, mas ambicion tienen pa
atestiguan este fenómeno? Con mas razon un ciego ra remontarse hasta la eternidad, y jamás han con
de nacimiento, respecto de lo que se dice de los co venido en sus sistemas cronológicos. Tambien es cier
lores y de un espejo, de una perspectiva que parece to que la historia china hace mencion de un diluvio
imposible y contradictoria, debe oponerse á Cerº.- cuya fecha no fija.
tidumbre moral de todos estos fenómenos, fundada * Hay una afinidad muy sensible y probada en
sobre el testimonio constante y uniforme de todos los tre Fo-hi y Noé. Porque f.º dicen los chinos que
que tienen ojos. Fo-hi no turo padre. Noé fue el primer hombre de la
3." Es claro, por todos estos ejemplos, que lo que tierra despues del diluvio; sus antepasados perecie
place á nuestros filósojos llamar esperiencia constan— ron en las aguas, y como su memoria no se conservó
en la tradicion de los chinos, pasa por no haber teni
te y certidumbre física absoluta no es en el fondo mas
que una falta de esperiencia y una pura ignorancia. do padre. 2." Los chinos dicen que la madre de Fo-hi
Porque nosotros no hayamos visto tal ó cual fenó— le concibió rodeada por el arco iris. Esta idea debe su
meno, ¿se deduce que nadie en el mundo lo haya origen probablemente á que Dios nos dió el arco iris
visto y que nuestra ignorancia acerca de este punto como señal de reconciliacion á Noé y á su posperidad.
deba prevalecer sobre el testimonio, positivo de sus 3." Fo—hi crió con cuidado animales de siete especies di
ojos? Hé aquí, no obstante, el absurdó sobre el cual ferentes que tenia costumbre de sacrificar al Chang
se han fundado en nuestros dias disertaciones sábias; Ti, ó soberano espíritu del cielo y de la tierra. Moi
y en esto mismo algunos hábiles protestantes, han sés nos dice que Noé metió con él en el arca siete ani:
creido destruir toda certidumbre del milagro de la males no impuros de cada especie, y que despues del
transubstanciacion. diluvio cogió todos los animales puros y todas las aves
Tambien los incrédulos, invenciblemente refuta puras y ofreció de ellas holocaustos..." Los chinos de
dos sobre todas las objeciones que hicieron contra la rivan el nombre de Fo-hi de las ofrendas que hizo. Moi
certidumbre de los milagros, se han visto obligados sés dice que Noé fue llamado asi en razon á que por
á sostener que son imposibles, y acogerse á la hipó su ofrenda obtuvo de Dios para los hombres el per
tesis de la necesidad, de la fatalidad ó del materialis miso de comer carne. Por último, la palabra Puon-ku,
mo. V. HECHos, MiLAGRos. de la cual se sirven los chinos, significa exactamente
el antiguo ó el primogénito del arca, de la nave. Los
Cesáreo (san). Arzobispo de Arlés: Presidió el chinos entienden, pues, por esta palabra un hombre
año 529 el concilio de Orange, en el cual fueron con salvado de las aguas, y el primogénito ó el mas viejo
denados los semi-pelagianos; murió el año 52. De de los que fueron salvados con él.
jó algunos sermones, de los cuales la mayor parte fue En las Memorias de la Academia de las Inscripcions
ron atribuidos á S. Ambrosio y á S. Agustin; se en título 65, en 12, p. 305. Mr. Guignes, despues de ha
cuentran en el Apéndice del quinto tomo de las obras ber examinado sin preocupacion la antigua historia
de S. Agustin, edicion de los benedictinos. S. Cesá china, ha juzgado que no es cierta ni auténtica, que
reo hizo tambien una regla para las religiosas. no puede suministrarnos nociones exactas del estade
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en que se encontraba esta nacion en los tiempos próc ue ha sido ya desfigurado por un culto religioso ren
simos á su formacion. No tiene ninguna observacion ¿, á los espíritus y á las almas de los difuntos.
de geografía ni de cronología, como ni encadena En el dia el emperador, el pueblo de la China y
miento ni trabazon. El sabio académico no tiene el los eruditos se han enlregado todos al politeismo,
entusiasmo que MM. Fourmont y Freret habian con— á la idolatria, y muchos de estos últimos caen en el
aleismo.
cebido por los anales chinos; deben lamentarse los
esfuerzos que hicieron para conciliar estos monumen Se ha querido hacer un mérito á Confucio de que
tos con la cronología de la historia santa. no se ha alabado de ser enviado de Dios, ni ins
* Qué fondo, pregunta Mr. Goguet (origen de las pirado. e

leyes, t. 3, diss. º qué consecuencia puede sacarse Se engañan en esto: desde el momento que se pre
de la certidumbre de la cronología china, por lo que sentó como órgano de los antiguos sábios chinos es co
toca á los primeros tiempos, cuando se vé á estos pue mo si se hubiera llamado venido del cielo. Los chinos
blos confesar unánimemente que uno de sus mayores llevan el respeto hácia sus antepasados hasta la ado
monarcas, enemigo por interés de las tradiciones racion, hacen de ellos otras tantas divinidades. Confu
antiguas y de los que podian saberlas, hizo quemar cio se alaba de haber visto muchas veces en sueños á
todos los libros que no trataban ni de agricultura, ni un antiguo filósofo, y de haber recibido lecciones de
de unedicina, ni de adivinacion; destruvó todos los él; esto vale tanto como las revelaciones que Numa
monumentos trató por espacio de muchos años de habia tenido de la ninfa Egeria y Mahoma del án
destruir todo lo que podia recordar el conocimiento gel Gabriel. Por otra parte, los sábios disputan para
de los tiempos posteriores á su reinado? Cuarenta saber si Confucio supuso un Dios, ¿cómo se habia él
años próximamente despues de su muerte trataron de llamar enviado de Dios? «La religion china, dice l
de restablecer los monumentos históricos. Para este Mr. Guignes, tomada en general, difiere poco de las
efecto se recogieron, dicen, las tradiciones de los vie— demas religiones paganas; una multitud de divinida
jos, se desenterraron algunos fragmentos de libros des presiden al cielo, á la tierra, á los elementos,
escapados al incendio general, se reunieron segun se á los truenos, á los vientos, á las lluvias, á los mon
pudo estos diferentes relazos, y del todo se trató de les, á los rios y á todas las partes de la naturaleza.
componer una historia seguida. No obstante, solo des Todas estas divinidades, cuya idea se quiere dulcifi
pues de 500 años despues de la destruccion de los car fio llamándolas mas que espíritus, éstan subordi
monumentos, es decir, el año 37 antes de Jesucristo, nadas á la primera, que recompensa á los buenos y
es cuando se vió aparecer un cuerpo completo de la castiga á los malos, y que vé todo lo que pasa en el
historia antigua. El autor mismo, Sema Trien, que universo.» Memorias de la Academia de las Inscrip
la compuso, tuvo la buena fé de confesar que no le ciones, t. 77, en 12, p. 30'. Mosheim y Bruker creen
habia sido posible remontarse con certidumbre 800 que el sistema filosófico que sirve de base á la reli
años mas allá de la época en que escribia. gion china no es mas que el antiguo estoicismo, y
«Tal es la confesion unánime que hacen los chinos; º su Dios, pretendido supremo, es el alma del mun
dejo á la consideracion de los demas, despues de un 0, de la cual han salido por emanacion los espíri
hecho, semejante el grado de certidumbre de su his tus motores de la naturaleza y las almas humanas.
toria antigua. Tambien se esperimentan cuando se Esta es tambien la opinion de muchos filósofos in
quiere tratar de ella dificultades y contradicciones dios. Hist. crit.philos, t. 6, p. 886 y 888. Este sis
insuperables. Las diferencias que se nolan en las épo— lema ha debido arrastrar necesariamente á los eruditos
cas principales prueban que la historia de los chinos chinos á la idolatria. V. ALMA DEL MUNDo.
no tiene ninguna superioridad ni ventaja sobre las Pero ademas de esta secta principal, hay tambien
demas historias profanas. Reina en ella una incerti otras dos en la China, la de Laiho-Hiun, cuyos dis
dumbre semejante á la que los cronologistas esperi cípulos admiten un dios material y otras divinidades
menlan en sus investigaciones acerca de la historia inferiores, y creen que el alma perece con el cuerpo.
de los babilonios, de los egipcios y de los primeros Creen en los augurios, en la adivinacion, rinden
reyes de la Grecia. Por otra parte, está igualmente culto á los muertos y dan en toda clase de supersti
desnuda de hechos, de circunstancias y detalles. ciones. Otra tercera secta es la de Fo ó Foé, que tie
«Respecto de las observaciones astronómicas en ne por autor un filósofo indio de este nombre; sus
que se ha tratado de apoyar las pretendidas antigüe partidarios adoran tres ídolos nonstrucsos, colocan
¿ chinas, la suposicion es lan sensible, que ha si— tambien otros mas pequeños en las pagodas y en los
do conocida por algunos eruditos, á pesar de la poca grandes caminos, y los tienen todos en sus casas. Es
idea que en general tienen los chiños de la crítica. ta secta, que es la del pueblo, mantiene millares de
Se puede asegurar sin miedo de equivocarse que has— boncios, especie de religiosos que viven en comun y
ta el año 206 antes de Jesucristo, su historia no me— en el celibato, son muy interesados, viciosos y des
rece ningun crédito. Es un tegido perpétuo de fábu preciados. Se encuentrán tambien en la China ado
las y contradicciones, es un caos monstruoso del que radores del gran Lama, que habita en Barantola, en
¿ puede eslractar nada seguido ni razona— el Thibet.
(º.))
No es, pues, cierto que la religicn del emperador y
2.º, Han asegurado nuestros filósofos que la reli de los chinos instruidos sea el deismo ó la religion
gion de los chinos es el teismo puro, sin ninguna mez natural, como se asegura en el Diccionario geográfico;
cla de fábulas ni de supersticiones. Mas está probado es constante, por el contrario, que la religion ense
de una manera incontestable que el pretendido teismo ñada en sus libros clásicos es el estoicismo, por con
de los chinos no subsiste sino en sus libros antiguos, y siguiente el culto del alma del mundo añadido al po
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liteismo y á la idolatría, tal como lo praclicaban artículos de la ley á los cuales obedezco.—No puedo
4.
los griegos y los romanos; que en la práctica el em cambiar.
perador y los eruditos adoran á Fo y Poussa y son mas «Nosotros respondimos: Estos diez mandamientos
supersticiosos; es un hecho atestiguado en las nue se encuentran en todos nuestros libros, y no hay na
vas Memorias de los Misioneros de Pekin. die que deje de observarlos, ó si alguno falta á ellos,
* El P. Prémare, Cartas edific., t. 22, p. 177, di se le castiga de la manera que prescribe la ley.»
ce que «la religion de la China está comprendida to 3.° Las leyes morales de Confucio, por mas que
da en los King. Se encuentran en ellos, en cuanto á se diga, no valen mas que sus dogmas; no se fundan
la doctrina fundamental, los principios de la ley na en nada, este filósofo no ofrece mas que recompen
tural, que los antiguos chinos habian recibido de los sas temporales. Ahora bien, un chino puede ser tan
hijos de Noé. Enseñan á conocer y reverenciar un ser sencillo para persuadirse que las virtudes morales
soberano. El emperador es á la vez rey y pontífice tienen el poder de dirigir la marcha de la naturale
como los patriarcas antes de la ley escritá; al em za, de producir el buen tiempo y la lluvia, la abun
¿ pertenece el ofrecer el sacrificio por su pue dancia y la prosperidad, y evitar los azotes y las
lo en cierta época del año; al emperador toca es desgracias? Conflicio lo dice terminantemente en el
tablecer las ceremonias y juzgar de la doctrina. Pro Chou-King. p. 172. Tambien, de todas las leccio
¿ no hay mas que esta religion que pueda nes de moral no hay ningunas peor observadas que
lamarse Iu-JKiao, la religion de la China. Todas las las de Confucio; el pueblo no está en estado de leer
demas sectas estendidas por el imperio son conside las ni conocerlas.
radas como estrañas, falsas y perniciosas, y solo se Con muy poca razon se nos alaba la moral de este
toleran. filósofo, la legislacion, y gobierno de los chinos, la
De Guignes, Viaje á Pekin, t. 1, p. 350 dice: rosperidad singular de este imperio. Despues de ha
«Asi vemos al principio los chinos adorar al ser su er éxaminado estos diferentes capítulos, nos pare
premo bajo el nombre de Chang-Ty, de Hoang-Tien ce que la moral de los filósofos chinos es muy imper—
de Tien y ofrecerle sacrificios sobre las alturas y en fecta y viciosa en muchos puntos, y las costumbres
os templos..... La moral se reducia entonces á dos públicas de la China son muy malas. No hay en este
yirtudes llamadas Gin é Y: la primera representaba imperio ningun código de leyes fijas; la voluntad
la virtud con respecto á Dios y ¿ padres, ó la bon arbitraria y despótica del emperador es lo único que
dad para con los hombres; y la segunda significaba manda en lugar de leyes. Tambien la China ha espe
la equidad y la justicia.» rimentado veinte y dos revoluciones, generales y la
Habiendo abrazado el cristianismo algunos prín policía es allí muy defectuosa. La poblacion escesiva
cipes de la familia imperial, prescribió el empera— que se supone en este pais proviene del clima, y de
dor á los jueces cómo debian proceder con respec— la fertilidad del suelo, mas bien que de la sabiduría
to á ellos, y los jueces les dieron cuenta en estos del gobierno, El Chou—King, libro clásico de los chi
términos de los esfuerzos que habian hecho para nos, publicado por M. de Guignes, las nuevas Me
atraerlos á la religion de los Manl—cheux. Cartas morias sobre la China redactadas por los misioneros
edif, t. 20, p. 129. de Pekin; y que empezaron á imprimirse en 1776,
-

«Nosotros, vuestros súbditos, nos hemos transpor nos desengañaron por último de todo lo maravilloso
tado á la prision de Ourthen (uno de los principes que nuestros filósofos habian publicado acerca de esta
laC10l.
cristianos), y le hemos dicho: El Señor del cielo es
el cielo, es lo mismo; no hay nacion sobre la lierra Hé aqui lo que dice el autor del viaje hecho á las
que no honre al cielo: los Mant—cheux tienen en su Indias y á la China, desde el año 177 hasta 1781,
casa el Tiao-ckin para honrarle. Vos que sois Mant l. 2, l. , c. 1: «En Francia los economistas, ocupa
cheoux seguís la ley de los europeos, y decis que dos en los cálculos sobre la subsistencia de los pueblos
os habeis inclinado á abrazarla en razon á los diez han hecho revivir en sus lecciones agronómicas las
mandamientos que propone y que son otros tantos fábulas que los misioneros habian vendido sobre el
artículos de esta ley: enseñadnos lo que pres comerció y el gobierno de los chinos; El dia en que
criben. bajó el emperador de su trono hasta el arado, fué ce
«Ourthen respondió: El primero nos manda hon lebrado en todos sus escritos; han preconizado esta
rar y amar al Señor del cielo; el segundo prohibe vana ceremonia, tan frívola como el culto rendido
jurar en nombre del Señor del cielo; el tercero quie por los griegos á Ceres, y que no impide que millares
re que se santifiquen los dias festivos recilando ora de chinos mueran de hambre ó espongan á ella á sus
ciones, y haciendo ceremonias ¿ honrar al Se hijos, por la impotencia en que se encuentran de pro
ñor del cielo; el cuarto manda honrar al rey, á los veer á su subsistencia.
padres y madres, á los ancianos, á los grandes y á «Las trabas que los chinos ponen á toda amistad se
todos los que tienen autoridad sobre nosotros; el guida entre ellos y los estrangeros, no tienen segura
quinto prohibe el homicidio y aun el pensamiento de mente otra causa que el sentimiento de su propia de
hacer daño á los demas; el sesto obliga á ser casto y bilidad: el gobierno de los pueblos esclavos es dema
modesto, y prohibe hasta los pensamientos y las afec siado vicioso para hacerse respelar por sus propias
ciones contrarios á la pureza; el sélimo prohibe ar fuerzas.... Las leyes solo son conocidas de los letra
rebatar el bien de otro, y aun el pensamiento de dos; los cargos de mandarines ó magistrados se com
usurparlo injustamente; e octavo prohibe la men pran; para pleitear en su tribunal es preciso arrui
tira, la maledicencia, las injurias; el noveno y dé narse; propiamente hablando el palo es el que gobier
cinuo prohiben desear la muger de otro. Tales son los na en la China. Las ordenanzas del gobierno no tienen
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fuerza sino en tanto que permanece fijo el edicto; los caracteres de su lengua no tienen mucho tíempº
cuando este desaparece, se violan impunemente; con de mas para entregarse á la filosofia: no hay entre
el dinero se evita todo castigo. Nadie se atreve á ellos escuelas públicas. Los chinos, tan tolerantes, no
mirar al emperador; cuando pasa es necesario volver han querido sin embargo, tolerar el cristianismo, por
la espalda ó prosternarse; va precedido de dos mil que es una religion estrangera y les parece nueva.
verdugos. ¿Es esto tambien una prueba de la perfeccion de su ló
«Confucio escribió algunos libros de moral, adop gica? Por el estado de las ciencias y del gobierno en la
tados al genio de su nacion: es un cúmulo de visiones China vemos lo que puede producir la tolerancia, cu
oscuras, de cuentos rancios mezclados con un poco yos efectos maravillosos no cesan de ensalzar nuestros
de filosofía. Sus obras, aunque llenas de absurdos, son escritores incrédulos.
adoradas por los chinos. Este filósofo dió fé á los agüe M. de Guignes, mejor instruido que el autor del
ros y á las suertes; los chinos no hacen nada sin ha Diccionario, está persuadido que los chinos, ya en
berlo consultado; tienen tantas mugeres cuantas pue. los tiempos antiguos ya en los siglos posteriores, han
den mantener. La idea de la muerte no cesa de ator sacado de los pueblos que estan al occidente de la Chi
mentarlos, y los persigue hasta en sus placeres; es— no todo lo que saben, y es una pura vanidad por su
penden sumas considerables en los funerales, hay mas parte el atribuírselo.
de un millon de bonzos en el imperio que no viven si No puede dudarse que el cristianismo penetró en la
no de limosnas, y su gefe goza de la mas alta consi— China muy pronto: algunos autores creen que fue lle
deracion. Un chino pasa la mitad de su vida en co— vado por el apóstol santo Tomás, tal vez tambien por
nocer los caracteres de su lengua, y la otra mitad en San Bartolomé ó por alguno de sus discípulos. Arno—
un serrallo; es imposible que las ciencias hagan pro bio, qne vivia en el siglo IV, dice que el cristianismo
gresos en la China; el emperador no puede pasar sin se habia establecido en las Indias, entre los seros ó
astrónomos estrangeros. chinos, los medos y los persas; mas por falta de misio
«Los chinos son cobardes, perezosos y malos guer neros ó por otras causas no parece que subsistió por
reros; siempre serán vencidos por las naciones que mucho tiempo.
quieran atacarlos; ninguna de sus ciudades podria En el siglo VII, los nestorianos, que habian lleva
sOstener un sitio de tres dias. Su artillería no es bue— do su religion á la costa de Malabar en las Indias y en
na mas que para los regocijos; sus fusiles son de me— la gran Tartaria, penetraron en la China y se estable
cha, y despues de haber apuntado vuelven la cabeza. cieron en ella. Este hecho está probado no solo por el
Treinta mil basmanes destruirian en muy poco tiem testimonio de muchos escritores orientales, sino por
un ejército de cien mil chinos. Son pícaros, orgu un monumento que fue desenterrado en 1625 en la
losos, insolentes y cobardes; diez europeos armados ciudad de Sigan-Fou, capital de una provincia de la
solo con palo harian huir á mil; y si no nos conceden China. Esta era una gran piedra en cuya parte supe
la menor libertad, es porque conocen su debilidad. rior habia una cruz, despues una larga inscripcion,
Mas el interés del comercio obliga á los comerciantes parte en caracteres chinos y parte en caracteres si—
europeos á sacrificar el honor de sus naciones; solo la riacos, mayúsculos llamados comunmente strangelo.
avaricia puede ponerles á la merced de un pueblo tan El magistrado del lugar, que creyó deber conservar—
despreciable por su carácter como por su ignorancia. la, la hizo trasportar á un templo de bonzos. Decia
Están espuestos á concusiones y vejaciones de todas que el año 635 de nuestra era habia arribado á la
clases, y las sufren para egercer un comercio tan su— China un hombre de Ta—Tsin ó del occidente,
pérfluo como oneroso.» que presentó al emperador algunos libros de la re
No salimos garantes de la esactitud de este cuadro, ligion que venia á predicar, y que el año 638 el em
está evidentemente cargado; muchos de los hechos perador habia dado un edicto á favor del cristianis
aventurados por el autor están terminantemente en mo. Se leian despues los principales dogmas de la re
contradiccion con las memorias enviadas de Pekin. ligion cristiana, añadiendo que esta inscripcion habia
Mas si el sábio académico que hizo el paralelo de Zo sido puesta para servir de monumento de estos hechos
roastres, de Confucio y de Mahoma, y el autor del el año 1092 de los griegos, y de Jesucristo el 780,
Diccionario de Geografia hubiesen consultado á este bajo el pontificado de Anan-Yesuo, patriarca de los
viagero y algunos otros monumentos, ó los habrian nestorianos.
refutado ó se hubieran abstenido de hacer el elogio La Croze, Bearsobre y otros críticos protestantes
de las leyes y gobierno de la China. Lo que el último han creido oportuno el poner en duda la autenticidad
encuentra mas admirable es que este gobierno tolera de este monumento, el suponer que era un fraude pia
todas las supersticiones y todas las sectas. Alli no se doso inventado por los misioneros católicos en 1625,
establece, dice, como en otra parte una inquisicion á fin de persuadir á los chinos que el cristianismo no
sobre el pensamiento del hombre; las leyes son tole era una religion nueva entre ellos, sino establecida
rantes acerca de esto, porque han sido hechas no por antiguamente en su imperio. M. de Guignes, en una
los boncios, sino por la razón. Dicen que la lógica de sabia disertacion sobre este objeto, Memorias de la
los chinos es mejor que la nuestra, que no enseña á Academia de las Inscripciones, l. 54, en 12, p. 295,
disputar sobre las palabras y á disecar un pensa ha probado la falsedad de esta sospecha, y la auten
miento; que los lógicos chinos valen mas que los dis ticidad de la inscripcion de Sigan-Fou por el tes
putadores eternos de nuestras universidades. timonio de los anales de la China y de muchos au
Al menos la lógica de los chinos no brilla en los tores chinos, Hace ver que estos autores han confun
absurdos que profesan en punto de religion y moral; dido los misioneros nestorianos con los bonzos de
hombres que pasan la mitad de su vida en estudiar Fo, y que han designado bajo este nombre todos los
 Cli 03) Cli
predicadores de las religiones estrangeras; mas lo unos son ateos, otros idólatras y supersticiosos; el
que dicen se refiere tan exactamente por el tiempo y despotismo del emperador que es el gefe supremo y
las circunstancias al establecimiento de los nesto árbitro de la religion lo mismo que de las leyes,
rianos en la China, que es imposible que el acaso son otros tantos obstáculos que hacen muy difíciles
haya podido producir esta conformidad. Prueba tam las conversiones. Los chinos desprecian á los estran
bien por el testimonio de los viageros, que existian geros, los lemen y los aborrecen. Desgraciadamente
tambien cristianos nestorianos en la China en los si os navegantes de las diferentes naciones europeas que
glos XI y XIII; pero que entonces su religion estaba han permanecido en la China no se han portado de
muy alterada y disfigurada por una mezcla de ma suerte que hayan ganado la confianza y el afecto de
hometismo; de tal suerte, que cuando los portugueses los habitantes del pais; y esta conducta no ha con—
arribaron á la China en 1517, no encontraron alli tribuido poco para indisponer á los chinos contra el
el menor vestigio del cristianismo. El sabio Assé cristianismo. Tendrian menos repugnancia en escu—
mani, por su parte, ha producido otras muchas char á los misioneros nacionales que á los estran—
pruebas de la autenticidad y verdad de la inscripcion geros.
hallada en Sigan-Fou. Bibliot. orient. t. , c. 9, S 6. Si nuestros filósofos incrédulos fuesen verdadera -
El juicio de estos sabios tiene otro peso que las vanas mente amigos de la humanidad, hubieran deplorado
conjeturas de los críticos protestantes. como nosotros el destierro de los misioneros de la
En 1580 fue cuando los PP. Roger y Riccio, misio China: por el contrario, han hecho un triunfo de ello:
ueros jesuilas, entraron en la China, y tres años des se han valido de esta ocasion para hacer odioso hasta
pues obtuvieron el permiso para establecerse alli. el mismo cristianismo, y á los que le predican. Dicen
En el espacio de un siglo la religion cristiana hizo que los emperadores de la China proscribieron esta
tantos progresos, que en 1715 habia ya en este im religion á causa de su intolerancia, ó del derecho
perio mas de trescientas iglesias, y lo menos tres que se atribuian sus ministros para obligar á los
cientos mil cristianos. Mas en 1722 el emperador pueblos á abrazarla; de la independencia de la cual
Yong-Tching publicó un edicto contra el cristianis quieren gozar respecto del poder temporal, de su ca
mo, resolvió esterminarle, é hizo egercer contra los rácter sedicioso y turbulento; y por fin del mal que
cristianos una sangrienta persecucion. En 1731 todos ¿ el celibato á la poblacion. No es posible ca
los misioneros fueron desterrados á Macao; des umniar de una manera mas denigrativa.
de 1733 no se permitió ya á ningun estrangero pene En las memorias presentadas al emperador de la
trar en el interior de la China; y los predicadores China por los mandarines contra el cristianismo, no
que fueron descubiertos, los condenaron á muerte. hacen ninguna de estas acusaciones á los misione
Los jesuitas que conservó el emperador en su corte ros; tan solo manifiestan que esta religion es nueva
en calidad de matemáticos no tienen permiso para y estrangera en el imperio, que no admite ni divi
ejercer las funciones de misioneros. No obstante, des nidad, ni espíritus, ni antepasados. Cartas edifi
de el año 1753 la persecueion fue menor; les era per— cantes, t. 29, p. 217 ; t. 30, p. 156. Se ve por todo
mitido asistir á los cristianos que alli habia aun; han esto lo que está probado en otra parte, que los letra
pedido al gobierno francés sucesores, con la esperan dos chinos hacen ir á la par el culto de los espíritus
za de obtener poco á poco mas libertad para hacer y de los antepasados con el culto de la divinidad
prosélilos. Se dice que en la actualidad existen mas y es mas dudoso que admitan otra divinidad que los
de sesenta mil cristianos en este imperio. espíritus que presiden á las diferentes partes de la
Desgraciadamente á principios de este siglo hubo naturaleza. La lectura del Chou-King, que es su li
algunas contestaciones entre los jesuitas de la China bro clásico, no nos manifiesta en ella ninguna olra
y los misioneros de las demas Ordenes religiosas. Se creencia que la de los antiguos politeistas.
trataba de saber si habia supersticion é idolatría en Aun cuando el genio de los misioneros fuese tal
los honores que los chinos rendian á Confucio y á sus como lo representan los incrédulos, han sido tan im
antepasados, honores acompañados de ofrendas, de prudentes para darlo á conocer, para predicar la in
invocaciones, perfumes, etc. En 1704 Clemente XI tolerancia, la independencia, la sedicion y subleva
condenó estos ritos chinos como supersticiosos é ido cion contra un gobierno absoluto y despótico? Una
látricos; en 172 Benedicto XIV confirmó este de acusacion tan atroz no debe aventurarse sin prue
creto por su bula Ea, quo singulgri: desde esta épo bas; los incrédulos no pueden alegar ninguna. Por
ca los misioneros prohibieron estos ritos á sus pro una parte, echan en cara al cristianismo el favorecer
sélitos; mas esta disputa, muy acalorada por una el despotismo de los príncipes y la esclavitud de los
y otra parte, perjudicó mucho á los intereses del pueblos; por otra pretenden que un emperador dés
cristianismo. -
pota ha tenido los principios y la moral de esta reli
Ademas de este obstáculo accidental y pasagero, gion; son dos acusaciones contradictorias.
hay otroscristiana
que retardarán Otro absurdo es el creer que los chinos que hacen
religion en estasiempre
parte dellosmundo.
progresos
La de la
cor perecer todos los años mas de treinta mil niños, te
rupcion de las costumbres populares de este imperio; miesen que el cristianismo perjudicara á la poblacion;
la adhesion pertinaz de los chinos á sus usos, adhesion que temen el celibato mientras que se encuentran en
cimentada por el culto religioso que rinden á sus an la China millones de bonzos que viven en él. En ge
tepasados; su vanidad que les persuade que son el neral, el gobierno chino teme mas el aumento de la
pueblo mas perfecto del universo; el orgullo, la am poblacion que su disminucion. Véase MisioN. -

bicion, los celos de los letrados, que son los únicos

que están en posesion de la enseñanza, de los cuales Cristº-saerum (se ciedad de). Tuvo
 (CE 0. CE
¿ en 1797 por Jacob Hendrik-Onderde posesion de sí mismo. Concebimos este paraje como
yngaart-Canzius, antiguo burgo-maestre de Delft, colocado mas alá del espacio inmenso que ve
á instancias de los menonitas, enemigos de los re mos encima de nosotros, y nada puede probar que
formados. No tuvo una forma regular hasta 1801. De sea falsa esta idea. Parece que está fundada en la
cuatro individuos llegaron á ser dos ó tres mil. Sus Sagrada Escritura que llama á esta morada divina
miembros repiten sin cesar que no son una secta sino los cielos de los cielos, ó los cielos mas elevados, el
una sociedad, con el fin de conciliar todas las religio tercer cielo. Tambien se llama la Jerusalen celestial,
nes. Admite á todo el que cree en la divinidad de Je el paraiso, el empíreo, es decir, la mansion del fue
sucristo y en la redencion del género humano, obrada go ó de la luz, el reino de los cielos y el reino de Dios;
por los méritos de la Pasion del Salvador. Esta de imas estas dos últimas espresiones significan muchas
claracion y su mismo título de Cristo-sacrum recha veces en el Evangelio el reinado del Mesias ó el rei
zarian la acusacion de deismo dirigida contra ella. no de Jesucristo sobre su Iglesia.
El culto se divide en culto de adoracion y de instruc El profeta Isalas y el apostol S. Juan han hecho
cion. El primero tiene lugar todos los domingos: se descripciones magnificas del cielo, de las riquezas
esponen en él las grandezas de Dios, manifestadas en que encierra, de la felicidad de los que le habitan,
las maravillas de la creacion. El segundo es cada mas S. Pablo nos advierte que el ojo no ha visto, que
quince dias: se desarrollan en él los principios de la el oido , no oyó, que el corazon del hombre no ha
religion revelada. Se celebra la cena seis veces al sentido lo que Dios prepara á los que le aman. I. Cor.,
año. Los asistentes se prosternan en el templo du c. 2, y 9. Esta felicidad sobrepuja á todos nuestros
rante la oracion y la bendicion. El número de miem pensamientos y espresiones, y no puede concebirse
bros de esta secta disminuye progresivamente. sino por los que la gozan. Véase FELicidAD ETERNA.
Cielo. Este término significa en la Sagrada Es— Ciencia de nios. Es el atributo por el cual
critura, asi como en el lenguaje de todos los pueblos, Dios conoce todas las cosas. No podemos concebirá
el espacio inmenso que rodea á la tierra, y que segun Dios de otra suerte mas que como una inteligencia in
nuestra manera de ver, está encima de nosotros; tal finita, y por consiguiente que conoce todo lo que es
es el sentido de los nombres que le designan en todas lo que puede ser: tal es la idea que de él nos dan
las lenguas. Por consiguiente, eielo significa: 1.° el os libros sanlos.
aire ó la atmósfera; 2.° el espacio mas lejano, en el Leemos en ellos, Job, c. 28, y. 2: «Dios ve las
cual giran los astros; 3." el lugar en que Dios mani estremidades del mundo, y considera todo lo que está
fiesta su gloria, y hace bienaventurados á los ángeles bajo el cielo». Cap. 2, y . 2. «Yo sé, señor, que
y á los santos. ¿ lo podeis, y que ningun pensamiento se os pue
Algunos escritores de nuestros dias dicen que los de ocultar». Baruch, c. 3, y.32. «El que sabe todo
hebreos tenian una idea falsa del cielo, que le consi— es el autor de la sabiduria». Ps. 138, y. 5. «Wos
deraban como una bóveda sólida, en la cual estaban conoceis, Señor, lo que ha precedido, y lo que debe
fijas las estrellas, y encima de la que existen depósi seguir... vuestra ciencia es admirable para mi, es
tos de agua ó cataratas, ó puertas para hacer caer la inmensa y no puedo llegará ella, etc». I. Reg. c. 2,
lluvia, etc. Todos estos delirios no tienen ningun y. 3. «El Señor es el Dios de la ciencia, y los pensa
fundamento en la Sagrada Escritura; es ridículo tomar mientos de los hombres le son conocidos de antema
al pie de la letra las espresiones populares, que está no». Rom. c. 11, y. 33. «Oh profundidad de los te
en uso entre nosotros lo mismo que entre los hebreos. soros de la sabiduria y de la ciencia de Dios, etcl
Una torre levantada hasta el cielo, hasta las nubes S. Agustin, l. 2, ad Simplic, q. 2, observa muy
indica una torre muy alta; las cataratas del cielo son bien que la ciencia de Dios es muy diferente de la
la caida del agua de la atmósfera; el fuego del cielo es nuestra, pero que nosotros nos vemos obligados á
el que cae de arriba; el ejército del cielo son los astros servirnos de los mismos términos para espresar una y
los ejes del cielo, cardines caeli, son los polvos sobre otra; nuestros conocimientos son accidentes ó modi—
los cuales parece girar, etc. ficaciones que recibimos sucesivamente, y que produ
En vano se ha insistido sobre que el cielo se ha lla cen un cambio en nosotros; Dios desde abaterno
mado muchas veces firmamento. El hebreo raquiah todo lo ha visto y conocido para toda la dura
que los Setenta han traducido por sereoMA y la vul— cion de los siglos; ningun pensamiento, ningun co—
gata por firmamentum significa espacio ó estension, nocimiento puede ocurrirle de nuevo; nada puede
nada mas. Uno de los interlocutores del libro de Job perder ni adquirir, pues que es inmutable.
que habia dicho que los cielos son muy sólidos y tan Dios, dicen los PP. de la Iglesia, ha previsto todos
firmes como el metal, es llamado en el capítulo si los acontecimientos pues que él es quien los ha diri
guiente un vano raciocinador, que habla como un gido como le plugo; no ha hecho las criaturas sin
ignorante. Job. c. 37, y. 18; c. 38, y. 2. Se dice saber lo qne hacia, lo que queria y podia hacer; si no
en el mismo libro que Dios ha colocado la tierra sobre conociera todas las cosas, no podria gobernarlas; ha
el vacio ó sobre la nada, c. 26, y, 7. Los hebreos riamos mal en atribuirle una providencia. «Llama,
llamaban como nosotros á la tierra el globo; no tenian dice S. Pablo, las cosas que no son, como las que
pues una idea falsa de la estructura del mundo. son». Rom. c. , y . 17.
CIELO. En el lenguaje de los teólogos es la man En los objetos de nuestros conocimientos distingui
sion de la felicidad eterna, el lugar en que Dios se mos lo pasado, lo presente, y lo futuro; con respecto
da á conocer á los justos de una manera mas per á Dios todo está presente, nada es pasado ni futuro"
fecta que sobre la tierra, y los hace felices por la porque su eternidad corresponde á todos los instantes
 CIE k05 CIE
de la duracion de las criaturas. Mas, para aliviar nipelagianos que Dios no se determina á dar la gra
nuestro debil entendimiento, distinguimos en Dios cia de la fé por las buenas disposiciones que prevee
tantas ciencias diferentes como esperimentamos en en aquellos á quieues se predica el Evangelio, ni se
nosotros mismos. Por consiguiente, los teólogos dis determina á privar de la gracia del bautismo á ciertos
tinguen en Dios: ninos, porque prevee su mala conducta futura, cuan
1." La ciencia de simple inteligencia, por la cual do lleguen á la edad madura. Véase á Petavio; Dogm.
Dios ve las cosas puramente posibles que jamas han Theol., t. 1, l: , c. 7. Asi raciocinan los teólogos que
ecsistido y que nunca ecsistirán. Como nada es posi se llaman molinistas y congruistas. V. CoNGRuistas.
ble sino por el poder de Dios, basta que Dios conozca Mas los tomislas y los augustianos sostienen que
toda la estension de su poder para conocer todo lo que esta ciencia media, inventada por Molina, es no solo
puede ser. inutil sino de un uso peligroso en las cuestiones de la
2." La ciencia de division, por la cual Dios ve to gracia y de la predestinacion. O la condicion, dicen,
do lo que ha ecsistido, lo que ecsiste ó ecsistirá en de la cual depende un acontecimiento tendrá lugar, ó
tiempo; por consiguiente , todos los pensamientos no se verificará: en el primer caso el futuro es absolu—
y todas las acciones de los hombres presentes, pasa to, y entonces es objeto de la ciencia de vision ó de
dos v futuros, el curso entero de la naturaleza, tal la presciencia; en el segundo este futuro, dicho condi
como ha sido y será en toda su duracion. Este co cional, es simplemente posible, y Dios lo vé por la
nocimiento claro y distinto es el que dirige la pro ciencia de simple inteligencia. Estos mismos teólogos
videncia de Dios, tanto en el orden de la naturale acusan á sus adversarios de dar lugar á las mismas
za como en el de la gracia. Esta ciencia, segun que consecuencias que S. Agustin ha combatido y que la
considera las cosas futuras, se llama prevision ó pres Iglesia condenó en los pelagianos y semipelagianos.
ciencia. Ya hablaremos de ella en su lugar. Véase Concíbese bien que los congruistas no quedan sin
PRESCIENCIA. réplica. Esta cuestion ha sido debatida por una y otra
3." Algunos teólogos admiten tambien en Dios una parte con mas calor que merecia: se escribió mucho
tercera ciencia que llaman ciencia media porque pare en pró y en contra sin que uno ú otro de los dos par
ce que es un término medio entre la ciencia de vision tidos haya adelantado ó retrocedido un solo paso. Ilu
y la ciencia de simple inteligencia. Hay, dicen, cosas bierasido mucho mejor, sin duda, renunciará todo sis
que no son futuras sino bajo ciertas condiciones ; si las tema, atenerse únicamente á lo que está revelado, y
condiciones deben verificarse, el acontecimiento que consentir en ignorar lo que Dios no quiso enseñarnos.
de ellas depende será futuro absolutamente, y como CIENCIAS HUMANAS. En nuestros dias los in
tal, es el objeto de la ciencia de vision ó de la prescien crédulos han llevado la prevencion contra el cristia—
cia. Si la condicion de que depende este acontecimien nismo hasta sostener que su establecimiento perjudi
to no debe verificarse, no ecsistirá jamas; entonces có á los progresos de las ciencias; refutaremos esta
es un futuro puramente condicional; no puede pues paradoja en la palabra LETRAs: sin embargo, direnios
ser la ciencia de vision que atañe á los futuros abso algunas con este motivo.
lutos ni la ciencia de simple inteligencia que tiene por Es incontestable que hace diez y siete siglos que las
objeto los posibles; no obstante, Dios la conoce, pues ciencias apenas han sido conocidas ni cultivadas mas
que muchas veces la ha revelado: es preciso pues dis que en las naciones cristianas; que los demas pueblos
tinguir esta ciencia divina de las dos anteriores. estan sumidos en la ignorancia , y en la barbarie.
Que Dios haya revelado mas de una vez los futuros Pueden compararse los pocos grados de conocimiento
puramente condicionales es un hecho probado por la que poseen los indios y los chinos con los que adqui
Sagrada Escritura. I. Reg. c. 23, y . 12. David pre rieron los pueblos de Europa? Cuando en los siglos X
gunta al Señor: «Si yo permanezco en Ceila, los ha y XI los mahometanos tuvieron alguna tintura de las
bitantes me entregarán á Saul? Dios respondió: Ellos ciencias, la habian recibido de las naciones cristianas,
os entregarán. Por consiguiente, David se retiró y no y no la conservaron por mucho tiempo; alli en don
fue entregado. Sap. c. , y. 11, se dice del justo que de han reinado los ha seguido la ignorancia; sin los
Dios le ha sacado del mundo por temor de que no se esfuerzos que se les han opuesto por principio de reli
pervirtiera con el contagio de las costumbres del siglo. gion, las ciencias hubiesen tenido en Europa la misma
Dios preveia pues que si este justo hubiese vivido mu suerte que en Asia; algunos incrédulos menos afer
cho tiempo, hubiera sucumbido á la tentacion del mal rados que los demas tienen la buena fé de convenir
ejemplo. Mat. c. 11, y.21, Jesucristo dice á los ju en esto.
dios incrédulos: «Si yo hubiese hecho en Tiro y Si Es verdad que desde el siglo IV de la Iglesia las
don los mismos milagros que he hecho entre voso ciencics no fueron cultivadas entre los griegos y ro
tros, estos pueblos hubiesen hecho penitencia bajo el manos con tanto esplendor y suceso como en el siglo
cilicio y la ceniza». Luc. c. 16, y.31, se dice de los de Augusto; mas los que lo han atribuido al estable—
hermanos del rico malo: «Aun cuando un muerto re cimiento del cristianiemo, han afectado ignorar los
sucitara para instruirlos, no le creerian». Hé aqui acontecimientos que precedieron y siguieron á esta
predicciones de futuros condicionales que no han su grande época de la historia.
cedido, porque no ha tenido lugar la cotidicion. Con efecto, desde el reinado de Neron hasta el de
Los PP. de la Iglesia discurrieron acerca de estos Teodosio, en el espacio de trescientos años, los paises
pasages, para probar que Dios ve lo que harian todas dominados por el gobierno romano fueron asolados
sus criaturas en todas las circunstancias en que ten por las guerras civiles entre los diferentes pretendien
ga á bien colocarlos; S. Agustin, sobre todo, ha hecho tes al imperio. Los bárbaros habian empezado ya á
uso de ellos para probar contra los pelagianos y se hacer irrupciones por todas partes; los germanos, los
TOMO I. 57
 CIE (406) CIE
sármatas, los cuados, los marcocasanes, los escitas, en otro tiempo no estaban cubiertas mas que de bos
los persas, los parthos desmembraron ó despoblaron ques, lagunas y algunos rebaños de salvajes. Los
algunas partes; las victorias de algunos emperadores misioneros y no los filósofos son los que han civiliza
no opusieron á este torrente mas que nn obstáculo do á los bárbaros; los nos han dado á conocer
pasagero. En el año 275 se vió caer sobre las Galias los paises y naciones de los confines del Asia, y los
un enjambre de puebles de la Alemania, los sygas, han descrito el carácter, las costumbres y género
los francos, los bourguiñones, los vándalos: se apo e vida de los salvajes de America. Si su celo intré
deraron de setenta ciudades y se hicieron dueños de pido no hubiese empezado por franquearnos el cami
ellas por espaciode dos años. Probo no consiguió lan no, ningun filósofo se hubiera atrevido á penetrar
zarlos el año 277 sino despues de haberles muerto alli. A ellos, pues, son deudores la geografia y las
cuatrocientos mil hombres. No tardaron en volver
diferentes partes de la historia natural, de los pro
con otros bárbaros en mayor número. Tillemont, Vida gresos inmensos que han hecho en estos últimos si
de los emperadores, t. 3, p. 425 y sig. En el siglo V glos. Si hubiesen trabajado con el designio de inspirar
los godos, los francos, los bourguiñones, los hunos, un reconocimiento á los filósofos, en el dia les hubie
los lombardos y los vándalos vinieron á establecerse sen dado motivo para arrepentirse.
en ellas, y poco á poco se apoderaron de todo el Occi Para conocer bien los pueblos modernos era preci
dente; en el VII los árabes asolaron el Oriente para so compararlos á los pueblos antiguos; ahora bien, no
establecer el mahometismo. No han cesado en nues— nos queda ningun monumento profano que nos dé una
tros climas las invasiones sino, por la conversion de idea tan esacta de los pueblos antiguos y de las pri
los pueblos del Norte. En medio de esta desolacion meras ideas del mundo como nuestros libros santos.
continua, cuya historia hace estremecer, es como las Los sabios que han querido remontarse al origen de
ciencias podian florecer y hacer progresos? - las leyes, de las ciencias y de las artes se han visto
Las pestes, las hambres, los temblores de tierra obligados á tomar la historia santa por base de sus
unieron sus devastaciones á las de la guerra; los que investigaciones. Los que han seguido un camino
han calculado las pérdidas que la poblacion ha tenido opuesto no nos han dado, bajo los nombres de histo
con estos diversos azotes dicen que bajo el reinado de ria filosófica y de filosofia de la historia mas que los
Justiniano el número de hombres se habia reducido á sueños de una imaginacion desarreglada y un caos de
menos de la mitad de los que eran en el siglo de Au errores y de absurdos.
gusto. Tiempos tan calamitosos no eran los masá pro En todas partes que se ha establecido el cristianis
pósito para las especulaciones de los sabios, ni para mo, tanto en medio de los hielos del Norte, como bajo
las investigaciones curiosas; mas el cristianismo no los ardores del Mediodia , ha llevado las ciencias, las
h podido influir nada en las causas de estas revo costumbres y la civilizacion: en donde ha desapareci—
luciones. do le ha reemplazado la barbarie. Los pueblos de las
Lejos de poner un obstáculo á los estudios, esta re costas del Africa y los del Egipto eran ilustrados,
ligion impulsaba á sus discípulos á instruirse, por el mientras que subsistió el Evangelio entre ellos: des
deseo de refutar, convencer y convertir á los filóso pues que cesó de alumbrarles esta antorcha, le suce
fos que la atacaban; las persecuciones mismas infla dió una noche profunda. La Grecia, en otro tiempo
maron el celo de los PP. de la lglesia. Se conocian tan fecunda en sabios, en artistas y filósofos, se ha
en los tres primeros siglos autores profanos que hubie hecho estéril para las ciencias; han cambiado la na
sen poseidó mejor la filosofia de su tiempo que los turaleza y el clima? No; el genio de los griegos siem—
apologistas de nuestra religion? - pre es el mismo; pero está ahora bajo la tiranía de
En el cuarto, cuando se dió la paz á la Iglesia por un gobierno tan enemigo de las ciencias como del cris
Constantino, es facil ver si los sabios del ¿? lianismo.
tenian conocimientos superiores á los de los doclores Ha sido preciso perder todo pudor para atreverse
cristianos. Juliano, enemigo declarado de estos últi
á escribir que esta religion ha retardado los progresos
mos, conocia perfectamente su ascendiente, cuando del entendimiento humano, y se ha opuesto á la per
deseaba que se destruyeran los libros de los galileos, feccion de las ciencias; por el contrario sin ella la Eu
Carta 9 á Ecdicius, y prohibia á los cristianos estu ropa entera estaria todavia sumida en la ignorancia
diar y enseñar las letras. Ningun filósofo de aquel que trajeron consigo los bárbaros del Norte. Esta
tiempo manifestó tantos conocimientos en materia de mos mas fundados para echar en cara á los filósofos
física é historia natural como S. Basilio en su Heara
incrédulos que su perlinacia y su método solo tienden
meron, Lactancio en su libro de Opificio Dei, Teo á la estincion de todas las ciencias,
doreto en sus Discursos sobre la Providencia, etc. Con efecto, si se e
darlas una base sólida, es
El mejor medio de perfeccionar las ciencias natura
les era el establecer la comunicacion entre las dife
¿ partir de las luces adquiridas por los que nos
an precedido, conocer sus errores, á fin de preservar
rentes partes del globo; enseñará conocer el suelo, nos de ellos; mas este proceder ecsige investigaciones
las riquezas, las costumbres, las leyes, el genio y el penosas; para evitar esto, nuestros escritores moder
lenguaje de los diversos pueblos del mundo; goza los han desacredilado todos los géneros de erudicion
mos en el dia de esta ventaja; pero á quién se la de hajo prelesto de que los que la han cultivado no eran
bemos? Es á los filósofos celosos por el bien de la filósofos: el estudio de las lenguas, de la crítica, de
humanidad, ó á los misioneros inflamados con el celo la literatura antigua y moderna les parece supérflua,
de la religion? El cristianismo que introdujeron en el todos se lisonjean de sacar la verdad de su cerebro
Norte hizo nacer la agricultura, la civilizacion, las quieren ser creadores, y repiten, sin saberlo, los ab
leyes, las ciencias; ha hecho florecer regiones que surdos filosoficos de los siglos pasados.
 CE 07) CIE
Para qué sirve el raciocinio, cuando se ignoran los disgustos. En aquella época vivian el Tasso, el Ariosto,
primeros principios del arte de raciocinar? En vano Maquiavelo, Bembo, Toricelli, Guichardin, Fra-Paolo,
se buscaria entre nuestros literatos incrédulos alguna etc; por lo tanto no era para Italia un siglo bárbaro.
tintura de lógica y metafísica: estas dos ciencias les des En 1611, durante su primer viaje á Roma, Galileo
agradan; serian un obstáculo para la impetuosidad de fué admirado y colmado de honores por los cardenales
Su ¿ á ejemplo de los antiguos epicúreos han sa— y los grandes señores á quienes manifestó sus descu
cudido el yugo. En lugar de raciocinar, declaman, se brimientos; volvió á esta ciudad en 1615; su sola pre
contradicen, no saben ni de qué principio han partido, sencia desconcertó las acusaciones formadas contra él.
ni á dónde tienen que llegar. El cardenal del Monte y diversos miemhros del santo
Nuestro siglo, sin duda, ha hecho grandesdescubri oficio le trazaron el círculo de prudencia en el cual
mientos en la fisica y en la historia natural; mas cuán debia contenerse; mas su ardor y vanidad le trastor
tas esperiencias dudosas no se nos han vendido por naron. «Ecsigió, dice Guichardin, en sus despachos
verdades incontestables? El gusto á los sistemas norei del de marzo de 1616, que el papa y el santo ofi
na menos que en otro tiempo, y los mas aventuradosson cio declarasen el sistema de Copérnico fundado en la
siempre los mejor acogidos; la hipotesis de los átomos Biblia.»
y de la divisibilidad de la materia hasta el infinito «Escribió memorias sobre memorias: Paulo V, can
se suceden y subyugan los entendimientos á su vez; sado con sus instancias, decretó que esta controversia
los términos inteligibles de atraccion, de gravitacion, fuese juzgada en una congregacion», «Galileo, añade
de electricidad y de magnetismo han reemplazado á Guichardin, llevó hasta alestremo todo esto: hacia mas
las cualidades ocultas de los antiguos: una imagina caso de su opinion que dela de sus amigos, etc.» Fuélla
cion nueva parece sublime desde el momento que pue— mado á Florencia en el mes de junio de 1616. El mis
de servir para combatir las verdades reveladas; y si se mo dice en sus cartas: «La congregacion tan solo
pudiera llegar á substituir la idea de la materia á la de ha decidido que la opinion del movimiento de la lier
Dios, nuestros filósofos creerian haberlo ganado todo. ra no está de acuerdo con la Biblia; yo no estoy per
Entre sus manos la historia no es mas que un tegi sonalmente interesado en el decreto». Antes de su par
do de conjeturas, un sistema de pirronismo, una serie tida tuvo una audiencia muy graciosa con el papa:
de libelos difamatorios. De todos los hechos, no admi Belarmino tan solo le prohibió, á nombre de la Santa
ten mas que los que están de acuerdo con su opinion, Sede, el hablar mas de la pretendida armonia entre la
no hacen caso sino de los autores que al parecer pien Biblia y Copérnico, sin que por esto renunciase á nin
san como ellos, denigran á todos los personajes cuya guna hipótesis astronómica. - - -

virtud les desagrada, llaman grandes hombres á los in Quince años despues, en 1632, bajo el pontificado
sensatos que llevan consigo el desprecio de todos los de Urbano VIII, Galileo imprimió sus célebres diálo
siglos. Su grande ambicion es el ser legisladores, po gos, Dell duo massime systeme dal mondo, con una
líticos, árbitros de la snerte de las naciones; mas al ata aprobacion y permiso supuestos, y contra la cual nin
car la ideade un Dios legislador, han minado la base de guno se atrevió á reclamar; volvió á dará luz sus me
todaslasleyes: en lugar dela moral de los hombres, nos morias escritas en 1616, en las que se esforzaba á.
rescriben la de los brutos, y fundan la política sobre erigir en cuestion de dogma la rotacion del globo
os principios de la anarquia. En un Estado bien arre sobre su eje. Se dice que los jesuitas escitaron con
glado, el ciudadano que declamara contra las leyes, tra él la cólera del papa. «Es preciso tratar este a
seria castigado por sedicioso; entre nosotros, es un ti contecimiento con dulzura, escribia el marqués Ni
tulo para pretender la celebridad. colini, en sus despachos del 5 de setiembre de 1632,
Si esta filosofía asoladora durase por mucho tiempo si el papa se incómoda todo se pierde: es necesario
en qué vendrian á parar las ciencias? Todo el mundo no disputar, ni amenazar, ni echar brabatas». Esto es
sabe cuál es la educacion de la juventud desde que lo que hacia Galileo. Se le citó á Roma y llegó á ella
los filósofos trataron de reformarla, y si el estado á que el 3 de febrero de 1633. No se le alojó en la inquisi
la han reducido es apropósito para formar hombres cion, sino en el palacio del enviado de Toscana. Un
laboriosos, sabios y útiles á su patria, mes despues se le puso, no en las cárceles de la in
Uno de los principales hechos que alegan para pro quisicion, como escribieron veinte autores, sino en
bar que el cristianismo es enemigo de las ciencias, es el departamento del fiscal, con libertad para estar
la pretendida persecucion que esperimentó Galileo en en comunicacion con el embajador, pasearse, y po
razon á sus descubrimientos astronómicos, y su con der enviar fuera su criado. Despues de diez y ocho
denacion en el tribunal de la inquisicion romana. Fe dias de detencion en la Minerva, fué enviado al pa
lizmente está en la actualidad probado por las cartas lacio de Toscana. En sus defensas no se trató de la
de Guichardin y del marqués Nicolini, embajadores esencia de su sistema, sino de su pretendida concilia
de Florencia, amigos, discípulos y protectores de Ga cion con la Biblia. Despues de dada la sentencia y he
lileo, por las cartas manuscritas y por las obras del cha la retractacion de Galileo acerca del punto dispu
mismo Galileo, que hace un siglo viene engañando al lado, fué dueño de volver á su patria. -

público sobre este hecho. Este filósofo no fué perse - El año siguiente de 1633, escribió al P. Receneri,
guido como buen astrónomo, sino como mal teólogo, su discípulo: «El Papa me creia digno de su esti
por haber querido mezclarse en esplicar la Biblia. macion..... Estuve alojado en el delicioso palacio de
Sus descubrimientos le suscitaron sin duda enemi la Trinidad del Monte. ... Cuando llegué al santo ofi
os celosos; mas solo su pertinacia en querer conci cio, dos religiosos dominicos me invitaron con mucha
iar la Biblia con Copérnico fué lo que dió lugar á bondadá hacer mi apología...;.. Me encontraba en la
que se le juzgase, y su petulancia fué el origen de sus obligacion de retractar mi opinion como buen católico.
 CIE CIE
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(Ya hemos visto mas arriba de lo que se trataba.) Pa tampoco se les permitia á los catecúmenos antes de su
ra castigarme me prohibieron los diálogos, y me des bautismo; no se les instruia al principio sino con
pidieron despues de cinco meses de mansion en Ro mucha reserva. V. SECRETo DE Los MISTERIos.
ina. Como reinaba la peste en Florencia, se me asig Por otra parte, en qué consistia, segun S. Clemente
nó para habitacion el palacio de mi mejor amigo, de Alejandria, la pretendida doctrina secreta de los
monseñor Picolomini, arzobispo de Sienna, en donde cristianos? Era la esplicacion mística y alegórica de
gocé de la mayor tranquilidad. En el dia estoy en mi los hechos, de las leyes, de las ceremonias del antiguo
campo, de Arcetres. en donde respiro un aire puro Testamento, y de los pasajes oscuros de los profetas.
cerca de mi cara patria.» Véase el Mercurio de Fran Este conocimiento ¿era muy necesario para el comun
cia del 17 de julio de 178%, n. 29. de los fieles ? La imprudencia de los protestantes que
Mas de veinte autores, principalmente entre los quieren que se ponga una Biblia entera entre las ma
protestantes, escribieron que Galileo fue perseguido y nos de los ignorantes y de los¿ que se les
l

aprisionado por haber sostenido que la tierra gira al ponga á leer en lengua vulgar el Cántico de los cánticos
rededor del sol; que este sistema fue condenado por y ciertos capítulos del proleta Ezequiel, no es un ejem
la inquisicion como falso, erróneo y contrario á la plo digno de seguirse. Esto no es propio mas que pa
Biblia, etc. Esto se supone y repite en muchos diccio ra engendrar y alimentar el fanatismo: la esperiencia
narios históricos; nuestros incrédulos modernos lo lo ha probado demasiado, y muchos protestantes han
han afirmado los unos despues de los otros, y apesar tenido la buena fé de convenir en ello.
de las pruebas irrecusables de lo contrario, lo re En la palabra SecRETo De Los MisTERuos veremos
tirán hasta el fin de los siglos. De esta suerte traba que la acusacion hecha por los protestantes á S. Cle
jan los filósofos en el adelanto de las ciencias. mente de Alejandria, es directamente contraria al
ClENCIA SECH ETA O DOCTRINA SECRETA. interés de su sistema.
Ciertos críticos protestantes, prevenidos contra los
PP. de la Iglesia, acusaron á S. Clemente de Alejan Cilicio. V. SACo.
dria de haber queridó introducir entre los cristianos
el método de enseñar de los filósofos paganos, que no Cipriano (san). Obispo de Cartago, mártir y
revelaban á todos sus discípulos el fondo de su doc doctor de la Iglesia. Vivió en el siglo III: padeció la
trina, sino á aquellos cuya inteligencia y discrecion co muerte por Jesucristo el año 258. La mejor edicion
nocian, y no instruian á los demas sino por emble de sus obras es la que principió Balucio y concluyó
mas, por figuras enigmáticas y sentencias oscuras. Dom Marand, belli , en 1726 en folio. -

Este método, continúan los censores de este Padre, no Muchos críticos protestantes, copiados sin discer—
es el de Jesucrislo, ni el de los apóstoles, ni el de los nimiento por nuestros literatos modernos, han vitupe
doctores cristianos mas sabios. Jesucristo manda á rado á este santo doctor algunos errores en materia
sus apóstoles el publicar en medio del dia las cosas de moral; condenó, dicen, la defensa de sí mismo con
que les enseñó en secreto, y predicar sobre los ter tra los ataques de un injusto agresor; ha exagerado
rados lo que les decia al oido. Mat. c. 10, y, 27. las alabanzas del celibato, de la continencia, de la
S. Pablo hace profesion de no haber disimulado nada limosna y del martirio. Estas acusaciones ¿estan pro
en sus instrucciones, de haber enseñado lo mismo en badas sólidamente ?
público que en particular. Act. c. 20, y. 20 y 27. S. Cipriano, en su tratado de Bonopatientiae, no ha
S. Justino y los demas apologistas del cristianismo hecho mas que repetir las máximas del Evangelio
protestan que no ocultan nada de lo que se hace y de sobre la necesidad de sufrir con paciencia la perse
lo que se enseña entre los cristianos. cucion de los enemigos del cristianismo. ¿Convenia á
Esta censura nos parece injusta y temeraria. Si se cristianos atacados, perseguidos, maltratados por su
quiere tomar el trabajo de leer el 5.ºlibro de los Stro religion, el defenderse contra agresores armados con
mates de S. Clemenle de Alejandria, c. 4, 9 y 10, se la autoridad pública, y apoyados en las leyes sangui
verá que este Padre enliende tan solo que hay en la narias de los emperadores? Si lo hubiesen hecho se
doctrina cristiana cosas que no están al alcance de les hubiera acusado de haberse sublevado contra la
los principiantes: que por lo tanto no debe enseñarse autoridad legítima; aun en el dia se les acusa, á pesar
á todos indiferentemente, sino á los que están en es de la falsedad del hecho. Mas tal es la equidad de
lado de comprenderlo, y que ya han hecho progre nuestros adversarios: por una parte echan en cara á
sos en el conocimiento de los misterios de la fé; nos— los cristianos el haberles faltado la paciencia, y por
otros sostenemos tambien que tal fue el método de Je otra á los PP. de la Iglesia el haber predicado dema
sucristo, de los apóstoles y de los doctores cristianos. siado la paciencia. Es un absurdo el aplicar á todos
«Tengo todavia muchas cosas que deciros; pero no los casos lo que el Evangelio y los PP. prescribian en
modeis comprenderlas en este momento». Asi ha tiempos de persecucion.
¿ Jesucristo á sus discípulos. Joan, c. 16, y. 12. De la misma manera en su Exhortacion á los Már
S. Pablo decia lo mismo á los Corintios, l. Cor. c. 3, tires no hace mas que reunir los pasajes de la Sagra
y. 1. «No he podido hablaros todavia como á hom— da Escritura sobre la obligacion de confesar á Jesu
nres espirituales sino como á hombres carnales; os cristo; los ejemplos de los que han padecido por este
he dado leche como á niños en Jesucristo, y no un motivo, y las promesas que Dios les ha hecho. Esto
alimento sólido, porque no podriais soportarlo; en es era necesario, porque habia una secta de hereges que
le momento todavía no sois capaces de él». Es cons enseñaba que era permitido el disimular su fé, y apos
tante que no se hubiera permitido á un pagano el ser tatar para evitar la muerte: ya lo vemos por el tra
testigo de la celebracion de nuestros santos misterios, tado de Tertuliano, titulado Scorpiace.
 CIP 09) CIR

Para presentar á S.Cipriano como culpable, Bar. juiciossos han alabado á S.Cipriano en circunslan
que no tenian razon, ¿ la Iglesia no siguió
beyrac en su Tratado de la moral de los PP.; c. 8, ciasparecer,
dice que segun este santo doctor, es laudable el de su y le han vitupera o cuando estaba lajus
sear el martirio en sí mismo y por sí mismo; esta adi ticia por su parte. Es falso que antes de este tiempo
ciones invencion del censor de los PP.; S.Cipriano el gobierno de la Iglesia haya sido tal como lo repre
no habló de esta suerte. Evidentemente comprendia sentan los protestantes: que S.Cipriano haya alte
que es un deseo laudable el desear el martirio para rado alguna cosa, y que esta pretendida alteracion
manifestar á Dios nuestro amor y adhesion, y para produjera tan malos efectos. Véase Obispo, GERAR
confirmar por este ejemplo á nuestros hermanos en QUIA.
la fé. Nosotros sostenemos que cualquiera de estos
dos motivos es laudable. De esto no se deduce, como Ci reconcel iones ó Scotopfitas. Donalistas
dice Barbeyrac, que sea laudable el irse á ofrecer de Africa en el siglo IV, llamados asi porque anda
uno mismo al martirio. Un cristiano puede desear que ban al rededor de las casas, en las ciudades y aldeas,
Dios le de valor para sufrir el martirio, sin que por bajo pretesto de vengar las injurias, reparar las in
esto tenga el derecho de esperar que Dios se lo con justicias y restablecer la igualdad entre los hombres.
cederá efectivamente. Ponian en libertad á los esclavos sin el consentimien
Cuando se considera la licencia de las costumbres to de sus patronos, declaraban solventes á los deudo
del paganismo y el mérito de la castidad bajo un cli res y cometian mil desórdenes. Makide y Faser fue
matan abrasador como el de Africa, se admira uno ron los gefes de estos bandidos entusiastas. Al prin
al ver la continencia practicada con la severidad que cipio llevaban palos que llamaban palos ó bastones
prescribe S.Cipriano en su tratado de Disciplina et de Israel, por alusion á los que los israelitas debian
habitu Virginum; mas esta severidad era indispen tener en la mano al comer el cordero pascual; despues
sable en Africa. El santo doctor ecsalta con razon la usaron armas para oprimir á los catolicos. Donato
virginidad, mas no degrada el matrimonio; no ha los llamaba los gefes de los santos, y ejercia por su
ce mas que repetir las lecciones de S. Pablo. No medio venganzas horribles. Un falso celo de martirio
hay mas que comparar las costumbres de los cartagi les impulsóá darse la muerte; los unos se precipi
neses paganos y de los berberiscos del dia con las taron desde lo, alto de las rocas ó se arrojaron al
de los cristianos instruidos por S.Cipriano y S. Agus— fuego, otros se degollaron. Los obispos, no estando
y entonces se verá si la moral de los PP. era en disposicion de contener por sí solos estos escesos
dSd. de furor, se vieron obligados á implorar la autoridad
Una prueba de que el santo mártir nada ecsageró de los magistrados; se enviaron soldados á los para
al hablar de las buenas obras y de la limosna, es que jes en que acostumbraban á reunirse los dias de
esta moral fué esactamente practicada por los fieles mercado público; hubo muchos muertos de entre
de su Iglesia. Nos enseña en su tratado de Mortalita ellos, los cuales fueron honrados como mártires por
te, que durante una peste cruel que asoló al Africa, los demas. Las mugeres, perdiendo su dulzura natu
los cristianos arrostraron la muerte para ausiliará ral, imitaron la barbarie de los circonceliones: se
-
los enfermos, sin distincion de religion, al paso que vieron muchas que á pesar de su embarazo, se arro
los paganos abandonaban á sus propios parientes. jaron por los precipicios. Véase S. Agustin, Haer. 69;
Lo único que puede vituperarse á S.Cipriano es Baronio, año 331, n. 9, 38, n. 26, etc., Prateolo,
el haberse engañado al sostener la nulidad del bau Filastro, etc. -

tismo administrado por los hereges: mas él no hizoº A mediados del siglo XIII se dió el mismo nombre
mas que censurar á los que tenian la opinion contra de circonceliones á algunos predicadores fanáticos de
TlaN la seguian en la práctica. Alemania que siguieron el partido del emperador
Nada demuestra mas la pertinacia de los protes— Federico, escomulgado en el concilio de Lyon por
lanles que el juicio que hicieron con respecto á la el papa Inocencio IV. Predicaban contra el papa,
conducta de este Padre, y la han alabado ó vitupe— contra los obispos, contra todo el clero y los religio—
rado segun se encontraba conforme ó contraria á sus sos; pretendian que todos habian perdido su caracter,
opiniones; de suerte que su censura destruye abso sus facultades y jurisdiccion por el mal uso que hi
lutamente todo el mérito de sus elogios. Como san cieron de ellas; qne todos los que seguian el partido de
Cipriano resistió á las decisiones de los papas Corne Federico obtendrian la remision de sus pecados; que
lio y Esteban, relativamente al uso de reiterar el bau todos los demas serian réprobos y condenados. Este
tismo administrado por los hereges, alaban su firmeza fanatismo hizo mucho daño al emperador, y apartó de
y valor, y añaden que en el siglo III no tenian los sus intereses un gran número de católicos. Véase Dupin
papas ninguna jurisdicion sobre toda la Iglesia. Por sobre el siglo XIII, p. 190.
otra parte, como el mismo santo no sostiene con me
nos fuerza la autoridad de los obispos en el gobierno Circum—Inceston. Véase TRINIDAD.
de la Iglesia, autoridad que desagrada á los protes
tantes, han vituperado á este Padre el no haber sa «Circuncision... Ceremonia religiosa de los
hido moderar el fuego de su temperamento, ni judios: consistia en cortar el prepucio de los niños
distinguir la verdad de la mentira, el haber intro ocho dias despues de nacer, ó de los adultos que que
ducido en el gobierno eclesiástico una alteracion que rian profesar la religion judia. La circuncision
tuvo las consecuencias mas funestas. Mosheim, His estaba en uso tambien en otros pueblos, pero no como
tor. ecles., siglo III, 2 º parte, c. 2 y 3; Histor. un acto de religion. No hablaremos mas que de la
crist, sec. 3." S. 1, pág. 511 y 512. Asi, estos críticos circuncision de los judios.
 CIR 10) CIR

Esta ceremonia tuvo principio en Abraham, á Spencer, de Legíb, Hebravor. Ritualib., l. 1. c. %.

quien Dios la prescribió como el sello de la alianza secc., ha referido las razones en pró y en contra con
que hizo con este patriarca. Gen. c. 17, }. 10. A con respecto al origen de la circuneision entre los judios, y
secuencia de esta ley, dada el año del mundo 2108, no ha querido decidir la cuestion.
Abraham, de edad entonces de noventa y nueve En vano se han buscado razones físicas de este uso
años, se circuncidó, asi como su hijo Ismael y todos entre los judios; una prueba de que no tenian necesi
los esclavos de su casa: y desde este tiempo la cir dad de ella, ni para la limpieza ni para evitar nin
cuncision fue una práctica hereditaria para sus des guna enfermedad, es que los cristianos, que por tanto
cendientes. Dios volvió á, reiterar este precepto á tiempo habitaron en la Palestina, los griegos que en el
Moisés. Erod. c. 12, y . ..., 8 Tácito, hablando de dia habitan con los turcos, jamas han practicado la
los judios. Hist. lib. 5, c. 5, reconoce espresamente circuncision, y no por esto han esperimentado la menor
que la circuncision les distinguia de las demas nacio incomodidad.
nes: S. Geronimo y otros autores eclesiásticos hacen Entre los hebreos, nada habia prescrito la ley con
la misma observacion. respecto al ministro ni al instrumento de la circunci
Celso y Juliano, para contradecir la historia sa sion; el padre del niño, un pariente, un sacerdote, un
grada, han dicho que Abraham, que habia venido cirujano podian hacer esta operacion. Se servian de
de Caldea á Egipio, encontró establecido en este una navaja, de un cuchillo ó de una piedra cortante.
pais el uso de la circuncision, y por lo tanto que pro Séfora, mujer de Moisés, circuncidó á su hijo Eliazar
venia de los e ipcios; que no era un signo distintivo con una piedra. Erod. c. , y . 25. Josué se sirvió
del pueblo de Dios. El caballero Marsham, Leclerc y tambien de ella para los israelitas en Galgala, c. 5,
otros dijeron lo mismo, fundados en algunos pasajes y. 2. Se dice que los egipcios usaban tambien de pie—
de Herodoto y de Diodoro de Sicilia. dras cortantes para abrir los cuerpos de los muertos
Se les opone: 1.° Que el testimonio de Herodoto que embalsamaban. Entre los judios modernos, la
sobre las antiguedades egipcias es muy sospechoso; circuncision se practica en los niños varones con mu
este autor que no ¿ lerigua de Egipto se ha cho aparato; mas no nos atañe el detalle de las ceremo
dejado engañar muy facilmente por los sacerdotes nias que la acompañan.
egipcios. Manethon, natural de este pais, le echa en Bajo los reyes de Siria, los judios apóstatas se es
cara muchos errores con este motivo. La autoridad de forzaron en borrar en sí mismos las señales de la cir
Moisés, que era mucho mas antiguo y mas instruido cuncision; se dice en el primer libro de los Macabeos,
que los estrangeros, nos parece preferible á la de He c. 1, y. 16: Fecerunt sibi praeputia, y Josefo con
rodoto y á la de Diodoro de Sicilia. viene en esto mismo, Antig. Jud. lib. 12, c. 6. San
2.”. Abraham, que viajó por Egipto, salió de este Pablo, 1. Cor. c. 7, y. 18, parece temer, que los
pais sin ser circuncidado, y no se ve la razon que le judios convertidos al cristianismo no hicieran lo mis—
movióá imitar un uso egipcio; no recibió la cicunci mo. Circuncisus aliquis vocatus est, non adducat prae
sion sino por una orden espresa de Dios, y hay mas putium., S. Gerónimo, Ruperto y Haimon niegan la
razones para creer ¿ por el contrario, los egipcios osibilidad del hecho, y creen que la circuncision es
adoptaron este uso de los israelitas, que permanecie indeleble; mas algunos médicos célebres sostienen lo
ron por mucho tiempo en Egipto. contrario: tales son Celso, Galeno, Bartolino, etc.,
3." . Los judios miraban la circuncision como un Ademas del efecto natural de distinguir los judios
deber de religion y de obligacion estrecha solo para los de las demas naciones, la circuncision tenia sus efec
"arones, con los cuales se practicaba á los ocho dias los morales: recordaba á los judios que descendian
de nacer; en los demas ¿ era una costumbre de del padre de los creyentes, de la raza de la cual debia
limpieza, de salud, acaso de necesidad física; no se nacer el Mesias; que debian imitar la fé de Abraham,
Practicaba en los niños hasta los catorce años; y las creer como él en las promesas de Dios. Segun Moisés,
Jºvenes tenian que sujetarseá ella como los varones. Deut. c. 30. y 6, era uu símbolo de la circuncision
º: La circuncisión de los varones nunca se esta del corazon; segun Philon de circuncis, y S., Pablo
bleció como una ley general entre los egipcios; S. Am Gálat. c. 5, y . 3, obligaba á los circuncisos á la ob
brºsio, Orígenes, S. Epifanio y Josefo atestiguan que servancia de toda ley: por último, era la figura del
solo los sacerdotes, los geómetras, los astrónomos y bautismo. Mr. Fleury, costumbres de los israelitas,
los sabios en la lengua geroglífica eran los que se observa que los antiguos judios no tenian una idea
¿? á esta ceremonia. Segun S. Clemente de tan ¿ de la circuncision como los rabinos mo
Alejandria, Strom. lib. 1. Pitágoras, viajando por dernos; muchos no la consideraban sino como un sim
Egipto, quiso sujetarse á ella á fin de iniciarse en los ple deber de educacion.
misterios de los sacerdotes, y de aprender los secre Los teólogos la consideran como un sacramento de
tos de su filosofia. -

la antigua ley, porque era un signo de la alianza de

Artapan, citado en Eusebio, Praep. Evang., 1.9, Dios con la posteridad de Abraham. Véase Sto. Tomas,
º. 27 asegura que fue Moisés el que comunicó la cir in , Sent. dist. 1, quaest. 1.", art. 2 adquartam. Mas
ººcision á los sacerdotes egipcios. Otros creen que este sacramento daba gracial y cómo? . .
º estuvo puesto en uso entre ellos hasta el reinado S. Agustin ha sostenido que la circuncision borra
º Salomon. Mucho tiempo despues de esta época, ba el pecado original á los niños, lib., de Nupt. et
ºquiel. c. 31, y.18; c. 33, y 19; y Jeremias, Concup. c. 2; lo repite en muchos pasajes de sus obras
º:º º. 2 y 25 cuentan tambien á los egipcios en contra los pelagianos y contra la carta de Petiliano.
º los pueblos incircuncisos. Mem. de la Acad. de las San Gregorio el Grande en sus Morales sobre Job, l. .
Inscripciones, t. 70, en 12.º, p. 112. c. 3, Beda, S. Fulgencio, S. Próspero, el maestro de
 CIR 11) CIR
las sentencias, Alejandro de Halés, Scot, Durando, sobre la Circuncision; Biblia de Aviñon, t. 1. p. 580,
S. Buenaventura, Estio, etc., son de la misma opi y t. 15, p. 314. -

nion; estos dos últimos hasta dicen que la circuncision CIRCUNCISION DE NUESTROSENOR, Fiesta que
producia la gracia,1U6ºearV d.opere operato, como los sacra se celebra en la Iglesia romana el primer dia de enero.
imentos de la -

El mismo Jesucristo dijo que no habia venido á des—

Por respetables que sean estas autoridades, no ha truir la ley sino á cumplirla; por consiguiente se sujetó
subyugado á los teólogos; el mayor número creen, á la circuncision y la recibio como los demas niños.
como Sto. Tomás, que la circuncision no fue institui Se cree comunmente que esto fue en Belen, y segun
da sino para servir de remedio al pecado original; lo S. Epifanio en la gruta en que habia nacido: recibió
prueban: 1.° porque el testo del Génesis, c. 17, y . 10 en esta ceremonia el nombre de Jesus ó de Salvador.
no dice nada de esto; no dá la circuncision sino como Luc. c. 2, y . 21.
una señal de alianza entre Dios y la posteridad de En otro tiempo se llamaba esta fiesta la Octava de la
Abraham. 2.° S. Pablo, Rom. c. 4, y . 11, dice Natividad; no se estableció bajo el nombre de circun
que Abraham recibió la circuncision como el sello cision hasta el siglo Vll y solo en España. En Fran
de la justicia que habia tenido antes de ser circun cia, el primero de enero era un dia de penitencia y
cidado. de ayuno para espiar las superticiones y los desór
El mismo apóstol, hablando en general de las cere denes á que se entregaban en este dia y que eran un
monias de la antigua ley, las llama elementos vacios y resto del paganismo. A estas diversiones profanas,
sin efectos, justicias de la carne; luego ninguna tenia abolidas en 1% , , segun la opinion de la facultad de
la virtud de borrar el pecado. 3." Todos los PP., an teologia de París, sustituyó una fiesta solemne que
tes de S. Agustin, sostuvieron unánimemente que la se celebra, actualmente en toda la Iglesia, que es
circuncision no tenia la virtud de borrar el pecado la fiesta del Santo Nombre de Jesus.
original; asi pensaron S. Justino, S. Ireneo, Tertu
liano, S.Cipriano, S. Juan Crisóstomo, S. Ambrosio, Cirilo (san). Patriarca de Jerusalen. Despues
S. Epifanio, Teodoreto, Teophilactes, OEcumenio, de haber sido depuesto tres veces de su silla por la
y una multitud de comentadores. 4.” Pues que el pe faccion de los arrianos, y restablecido, murió el año
cado original es comun á ambos sexos, no hubiese 385. Quedan de él veinte y tres catequesis ó instruc
habido hondad ni sabiduria por parte de Dios al esta ciones á los catecúmenos y á los recien bautizados
blecer para este pecado un remedio que no era apli ue encierran el compendio de la doctrina cristiana.
cable sino á los varones. 5.”Por qué esperar al octavo omo los críticos de los PP. no encontraban nada que
dia? por qué interrumpir por espacio de cuarenta años reprender en ellos, decian que estaban hechas de
la circuncision en el desierto, si era un remedio para prisa y sin preparacion. Es una prueba de que S. Ci
el pecado? 6.º Philon y los rabinos antiguos y mo rilo no tenia necesidad de prepararse para esponer la
dernos, á pesar de la alta idea que tenian de la cir creencia de la lglesia con toda la claridad, exactitud
cuncision, jamás la atribuyeron la virtud de borrar y precision, necesarias. Tambien tenemos de él una
el pecado; es hasta incierto si el comun de los judios Homilia sobre el paralítico del Evangelio, y una carta
tenia una idea del pecado original. al emperador Constancio, por la cual le participa, co
S. Agustin, para establecer su opinion, ha forzado mo testigo ocular, la aparicion milagrosa de una cruz
el sentido de la Sagrada Escritura. Leia en los Setenta en el cielo que se vió por espacio de muchas horas en
ó en la antigua vulgata: Todo niño varon cuya carne toda la ciudad de Jerusalen, y que molivó la con
no haya sido circuncidada á los ocho dias, será ester version de muchos paganos. Los críticos mas alrevi
minado de su pueblo porque ha violado mi alianza. dos no se determinaron á poner en duda este milagro,
Mas, 1.º estas palabras, el octavo dia, no estan ni en atestiguado de la misma suerte por otros muchos
el hebreo ni en nuestra vulgata, que está sacada del autores.
hebreo; ¿cómo un niño antes del uso de la razon po Como S. Cirilo predicaba en la lglesia del Calvario
dia violar la alianza del Señor? 2." San Agustin que sobre los vestigios de la cruz de Jesucrislo, habla del
ria que estas palabras, será esterminado de su pue misterio de la redencion con toda la energia de un
blo, significasen será condenado al infierno; pero so hombre penetrado de ella. Dom Toulteo, benedictino,
lo significan será castigado con la muerte ó será arre ha dado de las obras de este Padre una edicion grie
batado por una muerte prematura, ó será separado ga y latina en folio, publicada en 1720 por Dom Ma
del cuerpo de los israelitas, ó será privado de los pri rand. Las catequesis fueron traducidas al francés por
vilegios anejos á la alianza que Dios hahecho con Abra Grandcolas en 1715 en l.” Véanse Vida de los Pa
ham., 3." De esta última alianza es de la que se tra dres y de los Mártires, 18 Marzo.
la únicamente y no de la que Dios habia hecho con
nuestros primeros padres; alianza que, segun la idea CIRILO (SAN). Patriarca de Alejandria. Empleó
de S. Agustin, hemos violado todos en la persona de casi todo el tiempo de su episcopado en combatir la he
Adan. La palabra pactum, alianza, repetida has regia de Nestorio, y murió el año 4. Como Nestorio
ta ocho veces en el capítulo 16 del Génesis, signifi tuvo un gran número de partidarios, de los cuales
ca espresamente las obligaciones que Dios imponia á muchos eran respetables, y el celo de S. Cirilo les
Abraham. pareció demasiado vivo, los enemigos de la lglesia
No hay pues ninguna prueba para demostrar que antiguos y modernos han tratado de hacer odioso á
en la antigua leyó antes, Dios instituyese un reme este santo doctor. Presidió el concilio general de Efe
dio ó un signo esterior para borrar el pecado original. so, é hizo confirmar á la Santísima Vírgen el título de
Véase este artículo y las Disertaciones de Dom Calmet Madre de Dios, y por esto desagradó á los proteslan
 CIR 12 CR
tes; refutó la obra del emperador Juliano contra el donó el partido de Nestorio. ¿Se nos querrá persuadir
cristianismo, y esto es un motivo de ódio para los in - que Teodoreto, cuya ciencia y virtud no se pueden
crédulos; ¿d de ellos han deprimido su doctri poner en duda, no era suficientemente hábil para
na, sus virtudes, sus talentos. Dijeron que el nesto ver la diferencia que existia entre la doctrina de
rianismo, contra el cual este Padre hizo tanto ruido, Apolinar ó, de Eutiques y la de S. Cirilo? O que des
no era una heregia mas que en el nombre y una pu pues de haber sostenido al principio la verdad con
ra mala inteligencia; que al escribir contra Nestorio toda la firmeza posible la fue traidor tan cobarde
ue distinguia dos personas en Jesucristo, S. Cirilo mente? Esta cuestion se examinó de nuevo en el si—
ió en el error opuesto, confundió las dos naturalezas glo siguiente en el concilio general de Constantino
en Jesucristo como Apolinar, é hizo nacer la heregia pla celebrado con motivo de los tres capítulos; des
de Euty ques; que en el concilio de Efeso y en todo pues de un maduro exámen de todos los documentos
este negocio se condujo por pasion, por celos de au el concilio condenó lo que Teodoreto habia escrito
toridad contra Nestorio y contra Juan de Antioquia. contra S. Cirilo y contra el concilio de Efeso; de
Tal es la idea que han querido darnos de esto La Cro claró calumniadores á los que acusaban á este pa—
ce en sus Historias del cristianismo de las Indias y del triarca de Alejandría de haber tenido las mismas
de Etiopia, Le Clerc, Basnage, el traductor de Mos opiniones que Apolinar, sess. 8. Despues de mil y
heim, mucho menos moderado que el mismo Mos doscientos años, los críticos protestantes estan mas
heim, Tolando, etc. en estado de juzgar la cuestion que dos concilios ge
Mas estos críticos apasionados disimulan hechos nerales?
esenciales, por los cuales S. Cirilo queda plenamente Desde el momento que se demuestra que S. Cirilo
justificado. 1.° No se empeñó en el negocio de Nesto tenia por su parte la verdad y la justicia, es un ab—
rio sino por el ruido que hacian los escritos de este surdo el sostener que se condujo por capricho, por
innovador entre los religiosos de Egipto. 2.° Antes ambicion, por celos mas bien que por un verdadero
de proceder contra él, S. Cirilo le escribió muchas celo por la pureza de la é; suponerle motivos vicio
cartas para que se retractara o se esplicara, y para sos, mientras que los pudo tener laudables, y su con -
que no turbase la Iglesia; Nestorio no respondió á ducta fue aprobada por la iglesia. En los artículos
ellas sino con recriminaciones é invectivas. 3." Uno y EuriquIANismo y Neston IANismo probaremos que es—
otro escribieron á Roma al papa S. Celestino para tas opiniones condenadas, no solo no son errores de
consultarle y saber cuál era opinion de los occi— nombre ni puros equívocos, sino heregías formales
dentales. El papa reunió en el mes de agosto de 30 y muy dignas de censura; una y otra subsisten to
un concilio que condenó la doctrina de Nestorio y davia y estan apoyadas por sus partidarios, tales co
aprobó la de S. Cirilo; este no censuró á Nestorio en mo fueron condenadas por los concilios de Efeso y de
el concilio de Alejandria hasta tres meses despues. Calcedonia. Los protestantes no pueden fundar sus
..." Acacio de Berea, y Juan de Antioquia, aunque calumnias de otra suerte que en los clamores absur
revenidos á favor de Nestorio, le juzgaron conde— dos de los eutiquianos ó jacobitas, que no han deja
¿ solo fueron de parecer que no se debian notar do de repetir que el concilio de Calcedonia, al pros
con tanto calor espresiones poco exactas, y que era cribir la doctrina de Eutiques, condenó la de san
necesario tratarde apaciguar esta querella por medio Cirilo y canonizó la de Nestorio.
del silencio. Sin duda ignoraban que no era esta la Barbeyrac, que ha buscado con tanto cuidado erro
intencion de Nestorio: queria ser absuelto completa res de moral en los escritos de los PP. de la Iglesia,
mente y que fuese condenado S. Cirilo; con este de no ha notado ninguno en las obras del de que ha
signio pidió al emperador que se celebrase un conci blamos.
lio general. 5." El patriarca de Alejandria no presi Pero se le hacen acriminaciones mas graves: se
dió el concilio de Efeso sino por la comision que ha le acusa haber usurpado la autoridad civil en su ciu
bia recibido del papa S. Celestino, y no vemos que dad episcopal; el haberse incomodado por su ambi
los orientales desaprobaran esta providencia. 6." Tres cion, con Orestes, gobernador de Alejandría; el ha
años despues del concilio de Efeso, Juan de Antio berechado á los judios de esta ciudad; el haber cau
quia reconoció que habia hecho mal en tomar el par sado muchas sediciones y el asesinato de Hipacia,
tido de Nestorío, y se reconcilió sinceramente con jóven que profesaba la filosofia y á quien protegia el
S. Cirilo; él mismo rogó al emperador que sacase á gobernador; el haber tratado de poner en el número
Nestorio del monasterio en que estaba cerca de An de los mártires al religioso Ammonio castigado con
tioquia, porque maquinaba siempre, y pidió que la muerte por haber atacado y herido á este gober—
fuese desterrado á otra parte. Evagro, Hist. ecles., nador.
lib. I, c. 2 y sig. Todos estos hechos estan probados, Se sabe que el pueblo de Alejandría, dividido en
no solo por los escritos de S. Cirilo, sino tambien por tres religiones, era el mas.turbulento y sedicioso que
las actas del concilio de Efeso, y por el testimonio de hubo jamás; los cristianos, los judios y los paganos,
los escritores contemporáneos. estaban siempre prontos á venir á las manos y en—
Por lo que respecta á la doctrina de este Padre, tregarse á los mayores escesos. Esto es lo que impul
es tan irreprensible como su conducta. El concilio ge só á los emperadores á dar tanta autoridad á los
neral de Calcedonia celebrado veinte años despues del patriarcas; ei poder de estos no era una usurpacion
de Efeso, al condenar á Eutiques no creyóoportuno to violenta, los gobernadores tenian celos de eila. Los
car la doctrina de S. Cirilo. No obstante, á este concilio ¿ obligados á proteger á los cristianos contra
asistió Teodoreto, que escribió al principio contra San los ataques de los paganos y de los judios, no siem
Cirilo; pero se había reconciliado inego con él y aban pre tuvieron la suficiente fuerza para contener el fu
 CiR 13 (CIR
ror de unos y otros; es preciso no hacerles responsa inspiraba mayor recogimiento y respeto, por cu •

bles de los desórdenes que no podian impedir. motivo se observa que cuanto mas antiguas son l
Damascius, copiado por Suidas, no afirma que San iglesias son tanto mas oscuras.
Cirilo tuviese alguna parte en el asesinato de Hypa No es por consiguiente necesario recurrir á los usos
cia, pero que fue acusado de él porque este crimen de los paganos ni á los de los judios para hallar el
fue cometido por los cristianos. Brucker, Hist. filosófi origen de los cirios en las iglesias. S. Juan, que ha re
co t. 6, p. 280 y sig, cita con elogio una disertacion presentado en el Apocalipsis las asambleas cristia
escrita en 1747, en la cual S. Cirilo queda completa nas, hace mencion de cirios y candeleros de oro; en
mentejustificado de esteasesinato contra las calumnias los cánones apostólicos, can. 3, se habló de las lám
de Tolando. Castigó con razon á los judios que habian paras que ardian en la iglesia.
asesinado un gran número de cristianos, y el empera En todo tiempo y en todos los pueblos las ilumi
dor no lo encontró mal hecho. En cuanto al crimen y al naciones han sido un signo de alegria y un modo de
suplicio del fraile Ammonio, es preciso convenir que honrará los magnates: es pues muy natural que se em
S. Cirilo hizo mal en quererle honrar como mártir; él please tambien este signo para honrar á la Divinidad.
mismo lo comprendió y trató de que se olvidara este «En todo el Oriente, dice S. Gerónimo, se encienden
desgraciado negocio. Mas es preciso saber que estas cirios en las iglesias en medio del dia, no para disi
sediciones no tuvieron lugar sino á principios del obis par las linieblas sino en señal de alegría, y á fin de
pado de S. Cirilo, y que despues fue mucho mas representar, por medio de esta luz sensible, la luz in
iranquilo. Véase Sócrales, Hist., ecles. l. 7, c. 7, 13 terior de que habló el Salmista cuando dijo: «Vuestra
y sig con las notas de Valois y de los demas críticos. palabra, Señor, es una antorcha que me ilumina y
A fin de no omitir ningun género de acusaciones, La dirige mis pasos por el camino de la virtud.» Tom. ,
Croze dice que la condicion de S. Girilo era muy li 1." parte, pág. 28%.
era y su elocuencia mediana; que su obra contra Ju Los cirios nos hacen recordar que Jesucristo es la
íano es débil y no contiene casi nada que no sea co verdadera luz que ilumina á todos los hombres; que
piado de los escritos de Eusebio de Cesárea y de algu al pie de sus altares es donde recibimos la luz de la
nos otros antiguos; que apenas merecia ser leido sino gracia; que nosotros mismos debemos ser, por medio
nos hubiesen conservado algunos fragmentos de auto de nuestras buenas obras, una luz capaz de iluminar
res que no conocíamos, Hist. del cristianismo de las y edificar á nuestros hermanos. Mat. c. 5, y. 16.
Indias, t. 1.” p. 2. - Dom Claudio de Vert, en su Esplicacion de las ce
El que se haya tomado el trabajo de leer esta obra remonias de la Iglesia, se aventuró á asegurar que
y comparar las objeciones de Juliano con la respuesta al principio no se encendian cirios sino por necesi
de S. Cirilo queda convencido de la falsedad de este puesto que los oficios de la noche exigian este
crítico. No solo las pruebas y los raciocinios de este ausilio, y que no se comenzó sino despues del siglo IX
Padre son sólidos, sino que muchos trozos son muy á dar razones morales y místicas de éste uso. M. Lau
elocuentes, y en todos los pasages se vé cuánto aven guel al refular á dicho autor ha probado con monu
taja un autor juicioso á un bello espíritu. No es cierto mentos del III y IV siglo, que desde el princi
que se haya limitado á copiar, á Eusebio ni á los de pio de la Iglesia se ha usado de cirios en el oficio di
mas antiguos, y aun cuando lo hubiese hecho no por vino, por razones morales y místicas, para honrar á
esto seria vituperable; sigue á su adversario paso á Dios, para testificar de que Jesucristo es, regun la es
paso; no le deja ninguna objecion sin respuesta y presion de S. Juan, la verdadera luz que ilumina á
demuestra mucha erudicion sagrada y profana. La todo hombre que viene á este mundo; para hacer re
única cosa que pudiera decirse de él es el ser un po cordar á los fieles la palabra de este divino Maestro,
co difuso; mas Juliano mismo lo es mucho; no sigue que dijo á sus discípulos: Wos sois la luz del mundo,
ningun orden, y se aparta continuamente de su objeto: ceñid vuestros riñones y tened en la mano lámparas
era dificil no incurrir en el mismo defecto al refutarle. encendidas, etc, Esta es la razon porqué se ponia en la
Antes de dar un juicio sobre obras consagradas por mano de los nuevos bautizados un cirio encendido,
el respeto de doce siglos, los críticos modernos debian repitiéndoles ó haciéndolos repelir esta leccion, y por
mirarse en ello. la misma causa se encienden cirios para leer el Evan
Las obras de S. Cirilo de Alejandría fueron publi gelio en la misa. Asi fue que el concilio de Trento no
cadas en griego y en latin por Juan Auberi canónigo se equivocó al considerar este uso como de tradicion
de Laon, en 6 volúmenes en fol. el año 1638, Span apostólica, sess. 22, c. 5. Por consigniente, los protes
heim ha dado separadamente la obra contra Juliano, lantes cometieron un error en suprimirle y conside
á continuacion de las de este emperador en 1696, en rarle como un rito supersticioso.
folio. Al principio del V siglo, el herege Vigilancio ob—
jetó como ellos que este uso era una práctica to
Cirio. Vela de cera que se enciende en las cere mada de los paganos, los cuales hacian arder lámpa
monias religiosas. Como los primeros cristianos, en ras y cirios ante las estátuas de sus dioses. S. Geróni
tiempo de las persecuciones, no se atrevian á reunir mo le responde que el culto tributado por los paga
sino durante la noche, y las mas veces en ciertos si nos á sus ídolos era detestable, porque se dirigia á
tios subterráneos, se vieron obligados á servirse de unos objetos imaginarios é indignos de veneracion;
cirios y hachas para celebrar los santos misterios. Tam que el de los cristianos, dirigido á Dios y á los már
bien tuvieron necesidad de ellas tan luego como se tires es laudable, porque son unos seres reales y muy
les permitió edificar iglesias, siendo construidas de dignos de nuestros respetos. Por ventura, Maria, her
orma que recibian una luz muy escasa; la oscuridad mana de Lázaro, ¿hizo mal en derramar perfumes,
TOMO I. 58
v. CIR 41) CIS
para honrar á Jesucristo porque los paganos los der cilio de Nicea fijó el dia en que se debía celebrar a
ramaban tambien en sus templos? Ántes bien Jesu fiesta de la Pascua, el patriarca de Alejandría fue
eristo reprendio á sus discípulos cuando quisieron re el encargado de formar de dicha festividad un canon
probar y vituperar la santa prodigalidad de esta mu anual, y remitirle al papa. Como todas las fiestas
ger. Nos veremos en la precision de repetir veinte ve movibles se arreg'an por la de la Pascua, se formaba
ces que si debiéramos abstenernos de todas las prác todos los años un catálogo de fiestas, el cual se ins
ticrs de que abusaron los paganos, seria necesario su cribia sobre un cirio, y se bendecia este cirio por me
primir toda especie de culto esterior. Los abusos sub dio de una ceremonia muy pomposa.
sistian ya en las naciones idólatras cuando Dios pres Segun el abate Chatelain, este cirio no estaba des
cribió á los hebreos el culto que debian tributarle; tinado para que ardiese, pues no tenia pávilo, sino
quiso sin embargo que hiciesen en honor suyo muchas solo se empleaba para el servicio de tablillas para
cosas que praclicaban los paganos respecto á sus dio señalar las fiestas movibles del año corriente. En
ses. V. CEREMONIA, CULTo EstERNo. tonces se grababan en el mármol ó en el bronce las
El concilio de Elvira, celebrado hácia el año 300, cosas cuya memoria se queria perpetuar; se escribia
can. 3, prohibe se enciendan durante el dia cirios en en papel de Egipto lo que se queria conservar largo
los cementerios, porque, dice, no se debe inquietar á tiempo; se limitaba á delinear en la cera lo que de—
los espíritus ó almas de los santos. Se han dado dile bia ser de corta duracion. Despues se escribió la lis
rentes esplicaciones acerca de este canon: nos parece la de las fiestas movibles en papel, mas se adheria ó
que hace alusion á la queja que dirigió Samuela Saul pegaba siempre al cirio pascual esta costumbre se
cuando este le hizo llamar por la pitonisa de Endor: observa aun en nuestra Señora de Ruan y en todas las
Por qué habeis turbado mi reposo, haciéndome salir iglesias del Orden de Cluni. Tal parece ser el origen
de la tumba? Quare inquietasti me ut suscitarer? l.” e la bendicion del cirio pascual; mas se dice en esta
Reg. c. 28, y. 15. Por tanto, el concilio condenaba bendicion que este cirio encendido es el símbolo de
la supersticion de los que encendian cirios en los ce Jesucristo resucitado. El preacio, que forma parte
menterios, á fin de evocar á los muertos; esto era un de esta bendicion , es lo mas tarde del quinto siglo;
resto de paganismo. se encuentra en el misal galicano tal como se canta
En nuestros dias se ha llevado la necedad hasta el al presente: unos le atribuyen á S. Agustin y otros á
punto de calcular cuánto cuestan cada año las luces S. Leon. e

de las iglesias, haciendo subir el gasto de dicho alum

brado á cuatro millones en todo el reino, y se ha con Cismático, es unna. Este último término trae
venido sériamente en suprimir los cirios. Las razones su origen del griego, el cual significa division , se
en que se funda la necesidad de esta reforma se di paracion, rompimiento, y se llama asi al crimen
rigen nada menos ¿ á la supresion de toda ceremo de aquellos que, siendo miembros de la Iglesia cató.
nia que pueda ser dispendiosa. A lo que respondemos lica, se separan de ella para formar un bando apar—
que las lecciones de virtud valen más que el dinero; te, bajo pretesto que la iglesia ha caido en el error,
que los que nada dan á Dios, no se manifiestan muy que autoriza ciertos desórdenes y abusos, etc. Sepa—
inclinadºs á dar lampoco á los pobres; que no cor rados asi estos rebeldes son cismáticos; su partido
responde á unos filósofos sin religion prescribir lo que no es ya la Iglesia sino una secta particular. Ha ha
se debe practicar respecto á ella. No calculamos á bido en todos tiempos en el cristianismo varios espí
cuánto asciende el gasto cada año tocante á la ilumi ritus ligeros, orgullosos, ambiciosos de dominar y
nacion de los espectáculos y de las escuelas del vicio; constituirse gefes de partido, que se creyeron mas
del mismo modo pueden dispensarse de calcular los ilustrados que la Iglesia entera, quienes la han atri
astos del culto divino. Desgraciada toda nacion en buido falsamente errores y abusos, que han seducido
a cual se cuenta lo que cuesta honrar á Dios y ser una parte de sus hijos y han formado entre ellos una
hombre de bien. Véase el antiguo sacramentario, pri soçjedad nueva; los mismos apóstoles vieron nacer
mera parte, p. 52 y 717. -
¿ desórden, y no solo lo deporaron sino que tam—
Mas finalmente, d puesto que es preciso alegar ra bien lo condenaron. Los cismas principales de que
zones de política y de cálculo renístico para satisfa— habla la historia eclesiástica son el de los novacía
cer á nuestros censores, diremos que el consumo que nos, el de los donatistas, de los luciferianos, el de
se hace en las iglesias no es menos útil al comercio los griegos, que aun dura, y finalmente el de los
que el que se hace en las casas de los particulares.protestantes: hemos hablado de cada uno bajo su
ClRIO PASCUAL. En la Iglesia romana nos ser nombre particular; nos falta dar una nocion del gran
vimos de un grueso cirio, al cual pone un diácono cisma del Occidente, mas conviene examinar primero
cinco granos de incienso en forma de cruz, y encien si el cisma en sí mismo es siempre un crimen, ó si
de este cirio con fuego nuevo durante el oficio del ha podido existir algun motivo capaz de legitimarle.
sábado santo. -
Sostenemos que no hubo motivo alguno para le -
El pontifical dice que el papa Zosimo instituyó esta gitimarle, ni es posible que exista jamas; y que por
ceremonia: Baronio pretende que es mas antigua, y consiguiente todos los cismáticos estan fuera del ca
lo prueba con un himno de Prudencio; cree que Zo mino de la salvacion. Tal ha sido siempre el sentir
simo estendió solamente el uso de esta ceremonia á de la Iglesia católica; hé aqui las pruebas que alega
las iglesias parroquiales, y que anteriormente no se para fulminar dicha sentencia : 1. º la intencion de
servan de ella sino en las principales iglesias. Pape Jesucristo fue el establecer la union entre los miem
brock manifiesta con mayor esactitud su origen en su hros de su Iglesia, dice Joan. c. 10, y. 15: «Yo doy
Conatus chronico-historicus. Tan luego como el con— mi vida por mis ovejas, y tengo otras que no son aun
 ClS 15 CIS
de este redil, conviene que yo las traiga á él, y yo S. Pero advierte á los fieles «que asi como hubo
haré de todas un solo rebaño bajo un mismo pastor.» entre los judios falsos profetas, asi lambien habrá
Por lanto los que salen del redil para formar un re entre vosotros los cristianos doctores falsos que ne
baño aparle obran directamente contra la intencion garán la divinidad de Jesucristo que los ha reunido,
de Jesucristo. Es evidente que este divino Salvador, é introducirán en la Iglesia sectas perniciosas; ten
bajo el nombre de ovejas que no estaban aun en el drán la audacia de despreciar la autoridad legítima;
redil, entendia los gentiles; á pesar de la oposicion los cuales, por su propio interés, se crearán un
que existia entonces entre las dos opiniones, sus cos artido por medio de sis blasfemias..... atraeran á
tumbres, sus hábitos y los de los judios, queria for— 0s espíritus inconstantes y ligeros.... prometiéndo—
mar de todos ellos, no dos rebaños diferentes sino les la libertad, siendo ellos mismos esclavos del pe—
uno solo. Asi que, cuando los judios convertidos á cado que causa la corrupcion». 2." Pet., c. 2. 1,
la fé rehusaron fraternizar con los gentiles, á no ser 10, 1 y 19. No p0dia pintar mejor á los cismáticos
que estos últimos abrazasen las leyes y las costum que quieren, dicen, reformar la Iglesia.
bres judáicas, fueron reprendidos y condenados por Al hablar S. Juan acerca de ellos los llama ante—
los apóstoles. S. Pablo nos hace observar que uno de cristos: «De entre nosotros han salido, pero no eran
los grandes motivos de la venida de Jesucristo al mun verdaderamente nuestros; pues si lo hubieran sido,
do fue la de destruir el muro de separacion que ha hubieran permanecido con ñosotros en nuestra creen
bia entre la nacion judáica y las demas, y hacer ce— cía». 1.° Joan. c. 2, y, 19 (no 18).» S. Pablo
sar, por medio de su sacrificio, la enemistad decla ha trazado acerca de ellos un cuadro no menos odio
rada que los dividia y establecer entre ellos una paz so: ad Tim. 2." c. 3 y 4.: 3." No debemos por tanto
eterna; Ephes., c. 2, y. 1. ¿De qué hubiera ser admirarnos de que los PP. de la Iglesia, enteramiente
vido este tratado de paz, si se debiera permitirá unos aleccionados con la doctrina de los apóstoles, se le
nuevos doctores formar nuevas divisiones, y escitar vantasen contra todos los cismáticos y condenasen
bien pronto entre los miembros de la Iglesia unos su temeridad: S. Ireneo impugnando á todos los de
odios tan declarados como el que habia reinado en su tiempo que habian formado sectas; Tertuliano en
tre los judios y los gentiles? 2." S. Pablo, conforme sus Prescripciones contra los hereges: S.Cipriano
á las lecciones de Jesucristo, representa á la Iglesia, contra los novacianos; S. Agustin contra los dona
no solamente como un solo rebaño sino como una tislas; S. Gerónimo contra los luciferianos, etc., to—
sola familia y un solo cuerpo, cuyos miembros todos dos han adoptado por principio el que es imposible
unidos tan estrechamente entre sí como los del cuer eesisla causa alguna legítima por parte de los cismá
po humano, deben concurrir mútuamente á su bien ticos para romper la unidad de la Iglesia Prescinden
espiritual y temporal; les recomienda pongan el da unitatis nulla potest essejuacta necessitas; todos han
mayor cuidado en conservar por su humildad, su defendido que fuera de la Iglesia no hay salvacion.
dulzura, su paciencia y su caridad, la union de vo Las nociones de los primeros cristianos acerca de
luntades en el vínculo de la paz; Ephes., c. 1, y. 2.º la nnidad se refieren por Mr. de Trevern, Discusion
¿ no nos dejemos llevar como niños de todo viento amistosa sobre la Iglesia anglicana y en general sobre
e doctrina por la malicia de los hombres que con la leforma, t. 1." carta 2, p. 32 en las citas si
fraudulentas sutilezas pretenden hacernos caer en guientes:
error, ibid. y. 14. Asi como no hay mas que un Dios San Clemente, papa, en su admirable carta á los
tambien quiere que no haya mas que una sola fé y corintios, se queja acerca de la division impia y detes
un solo bautismo: para establecer esta unidad de fé, table (tales son sus palabras), que acaba de estallar
es por lo que Dios ha concedido á su Iglesia após— entre ellos. Los recuerda su antigua piedad; el tiem
toles y evangelistas, pastores y doctores, y . y 11. p0 en que llenos de humildad y sumision, eran tan
Por consiguiente, es rebelarse contra el órden de Dios incapaces de hacer una injuria como de sentirla. «En
el no querer oir las lecciones de los pastores y doc tonces, añade, toda especie de cisma era una abomi
lores que estableció, por escuchar las de unos nuevos nacion á vuestros ojos». Concluye diciendoles que se
ue se entrometen por sí mismos á enseñar su propia apresura á hacer volverá marchará Fortunato «áquien
octrina. dice, añadiremos cuatro diputados. Devolvednoslos
Recomienda á los corintios no fomenten entre sí cuanto antes en paz, á fin de que podamos saber
cismas ni disputas con el pretesto de sus apóstoles ó pronto que la union y concordia han vuelto á vuestro
de sus doctores; los reprende porque decían unos: seno, como no cesaremos de pedirlo por medio de
Yo he sido enseñado y bautizado por Pablo; otros: nuestros votos y oraciones, y á fin de que se nos con
Jo soy del partido de Apolo ó de Céfas; 1." Cor. c. 1, ceda regocijarnos del restablecimiento del huen or
y 10, 11 y 12. Vitupera toda especie de divisiones: den entre nuestros hermanos de Corinto». Qué diria
«Si alguno, dice, quiere defender obstinadamente este pontifice apostólico si hubiera visto las grandes
este abuso, no añado mas, sino que ni yo, ni la Igle defecciones del Oriente, de la Alemania y de la ln
sia de Dios aprobainos esta costumbre..... es con glaterra, quien á la primera noticia de una disputa
veniente que haya heregias y divisiones, para des acaecida entre una pequeña parte del rebaño, en una
cubrir entre vosotros, quiénes estan firmes en la fé, sola ciudad, se alarma al punto, trata este movi
y son virtuosos; c. 11, y. 16 y 19». Sabido es que miento de division impía, detestable, todo cisma y
la heregía es la eleccion de una doctrina particular. abominacion, y emplea la autoridad de su silla y sus
Coloca la disputa, las disensiones, las sectas, ene instancias palernales para atraer á los corintios á la
mistades y los celos en el número de las obras de la paz y concordia?
carne; Gálat, c. 5, y. 19 y 20. San Ignacio, discípulo de S. Pedro y de S. Juan
 CIS 16) CIS
se espresa en el mismo sentido. En su epístola á los San Justino, el cual de la filosofia platónica pasó
de Smirma, les dice: «Evitad los cismas y los desór al cristianismo, le defendió con sus apologías, y le
denes, origen de todos los males, Seguid á vues selló con su sangre, nos enseña que la Iglesia se con
tro obispo como áJesucristo, su Padre y al colegio de tiene en una sola y única comunion, de la que estan
sacerdotes como á los apóstoles. Nadie se atreva, á escluidos los hereges. «Ha habido, dice, y hay to
emprender cosa alguna en la Iglesia sin permiso del davia hombres, que cubriéndose con el nombre de
obispo». En su carta á Policarpo. «Vigilad, dice, cristianos, enseñaron al mundo dogmas contrarios
con el mayor cuidado en que se conserven, la unidad á Dios, impiedades, y blasfemias. No tenemos comu
y concordia, que son los primeros entre todos los bie nion alguna con ellos, considerándolos como enemi
nes». Luego los primeros de todos los males son el gos de Dios, impios y perversos.» Diálogo con Trifon.
cisma y la division. Despues en la misma carta, diri El grande obispo de Leon, S. Ireneo, discípulo de
giéndose á los fieles: «Escuchad á vuestro obispo, á Policarpo y martir lo mismo que su maestro, escri
fin de que Dios os escuche tambien, á vosotros. Con bia á Florino que habia visto frecuentemente á Po
cuánta alegria daria mi propia vida por los que se licarpo, y que comenzaba á esparcir ciertas heregias:
han mantenido sumisos al obispo, á los sacerdotes y «no es esta, por cierto, la instruccion que habeis re
á los diáconos! Ojala llegue el dia en que pueda es cibido de los obispos que os han precedido. Aun po—
tar unido á ellos en el Señor!» Y en su epístola á los dria manifestaros el sitio en que el bienaventurado
de Filadelfia: «Es cierto, dice, que no hallo cisma Policarpo, se sentaba para predicar la palabra de Dios.
alguno entre vosotros, sino que quiero defenderos co Me parece verle todavia con aquel aire grave que ja
mo. hijos que sois de Dios.» No basta esperar á que mas le abandonaba, recuerdo no solo de la santidad
haya estallado el cisma; es necesario prevenir su ma de su conducta, sino tambien de su magestuoso por
cimiento para sofocar hasta el germen». Todos los que te y de todo su esterior. Creo que le oigo aun refe—
son de Cristo, permanecen en el partido de su obispo, rirnos cómo habia conversado con Juan y con otras
mas los que se separan de él para abrazar la comunión muchas personas que habian visto á Jesucristo, y las
de unos hombres maldecidos, seran escluidos y con palabras que habia oido de boca de ellos. Puedo ase
denados juntamente con ellos». Y á los efesios: «Todo el guraros positivamente ante Dios, que si este santo
que se separa, dice, del obispo y no se conforma con obispo hubiera oido unos errores semejantes á los
los sentimientos de los primeros hijos de la Iglesia, es vuestros, al punto se hubiera tapado los oidos, escla
un lobo con piel de oveja. Esforzaos, muy amados mios, mando, segun su costumbre: Buen Dios! en qué si
en permanecer adheridos al obispo, á los sacerdotes glo me habeis permitido vivir para oir tales cosas?
á los diáconos. El que los obedece, obedece á Cris— Y al instante se hubiera alejado de aquel sitio.» Euseb.
o, por quien fueron establecidos: el que se rebela Hist. eccles. lib. 5. En su sabia obra acerca de las he
contra ellos se rebela contra Jesus». ¿Qué hubiera regias lib. I, dice, hablando de los cismáticos: «Dios
dicho despues delos que se rebelaron contra eljuicio de juzgará á los que han ocasionado cismas; hombres
los concilios ecuménicos, y que con desprecio de to crueles, que no tienen amor ninguno á Dios, y que
dos los obispos del mundo entero, se adhirieron á prefiriendo sus propios intereses á la unidad de la
algunos frailes ó sacerdotes refractarios, ó á una so— lglesia, no pesan aun las razones mas frívolas para
ciedad de seglares?S. Policarpo, discipulo de S. Juan, dividir y desgarrar el grande y glorioso cuerpo de
en su carta á los filipenses, declara todo su horror Jesucristo, y le darian voluntariamente la muerte, si
contra los que enseñan opiniones heréticas. Como estuviera en su poder.... Mas aquellos que separan
ue la heregía se opone á la vez tanto á la unidad de y dividen la unidad de la Iglesia, recibirán el castigo
octrina, corrompiéndola por medio de sus errores, de Jeroboan.
cuanto á la unidad de gobierno del que se sustrae por San Dionisio, obispo de Alejandria, en su carta á
obstinacion. «Seguid el ejemplo de nuestro Salvador Novato, el cual acababa de crear un cisma en Roma
añade Policarpo; permaneced firmes en la fé, inmuta donde habia hecho consagrar á Novaciano en oposi
bles en la unanimidad amandoos unos á otros». A la cion al legítimo papa Cornelio, le dice: «Si es cierto
edad de mas de ochenta años, se le vé partir para ir á como lo aseguras, que estás pesaroso de haber caido
Roma á conferenciar con el papa Aniceto acerca de en este escollo, muéstranoslo por medio de un arre
unos artículos de pura disciplina: se trataba principal pentimiento pronto y voluntario. Pues todo se debe
mente de la celebracion de la Pascua, que los asiáticos rá sufrir mas bien que separarse de la Iglesia de Dios.
solemnizahan lo mismo que los judios, el dia 14 de Tan glorioso seria el ser martir, por salvará la Igle
la luna equinocial, y los occidentales, el domingo sia de un cisma y de una separarion, como por no
que seguia al decimocuarló. Su negociacion tuvo el adorar los dioses, y aun mucho mas glorioso en mi
écsito deseado. Se convino en que las iglesias de Orien concepto, porque en el último caso padece el mar—
te y de Occidente siguiesen sus costumbres sin rom tirio por sola su alma; mas en el primero, por la
per los vínculos de comunion y de caridad. Durante Iglesia entera. Por consiguiente si puedes, en gracia
*u estancia en Roma, fue cuando habiendo encontra — de amistosas persuasiones óbien observando una con
do á Marcion en la calle, y queriendo huir de él: «¿No ducta varonil, hacer volver á tus hermanos á la uni
me conoces, Policarpo, le dice este herege? Sí, sin dad, esta accion buena será mas importante que lo
duda, le contestó el santo; te reconozco como hijo fue tu falta; esla última te se perdonará, mas la accion
primogénito de Satanás». No podia contener su san— buena te se alabará. Pero si rehusan seguirte á imi
ta indignacion contra aquellos que por medio de sus tar tu arrepentimiento, salva al menos tu alma. De
ºpiniones erróneas se dedicabaná pervertir y dividir seo prosperes siempre y que la paz del Señor pueda
á los cristianos, volverá entrar en tu corazon. Euseb. Hist. eccles. l. 6.
 CIS y 17 ClS
S.Cipriano: «No tendrá á Dios por padre en el Firmiliano de Cesarea, Teófilo de Antioquía, Laclan
cielo aquel que no haya tenido á la Iglesia por ma cio, Eusebio, Ambrosio, etc., y además de un núme
dre. Se figuran, pues, (los cismáticos) que Jesucristo ro tan considerable de ilustres testigos, las decisio
sea con ellos cuando se reunen, con unos hombres nes de los obispos reunidos en cuerpo en los concilios
que se reunen fuera de la Iglesia? Sepan que aun particulares de Elvira en 305; de Arlés, en 31; de
cuando dieran su vida por confesar el nombre de Gangres, hácia el año 360; de Zaragoza, 381; de Car
Cristo, no lavarian con su sangre la mancha del cis lago, 398; de Turin, 399; de Toledo, h00; en los con
ma, en razon á que el cisma de discordia es superior cilios generales de Nicea, 325; de Constantinopla, 331;
á toda espiacion. El que no está en la Iglesia no podrá de Efeso, 11; de Calcedonia, 51.
ser martir». Libro de la unidad. Declara despues la Deseo mas bien citar autoridades, que por ser mas
enormidad de este crimen por medio del espantoso modernas, no serán por tanto quizás de menos peso.
suplicio que sufrieron los primeros cismáticos, Coré, La confesion de Augsburgo, art. 7: «Enseñamos
Dathan, Abiron y sus doscientos cincuenta cómpli que la Iglesia, una y santa, subsistirá siempre. Res
ces: «La tierra se abrió bajo sus pies, los tragó pecto á la verdadera unidad de la Iglesia, basta acor.
vivos y derechos y los absorvió en sus ardientes en— darse de la doctrina del Evangelio y la administra
trañas. - -
cion de sacramentos, como dice S. Pablo: una fe, un
S. Hilario, obispo de Poitiers, se espresa asi acer bautismo, un Dios, padre de todos».
ca de la unidad: «Aunque no hay mas que una Igle— La confesion helvética, art. 12, hablando de las
sia en el mundo, cada ciudad tiene sin embargo su asambleas que tuvieron los fieles en todas épocas,
Iglesia, aun cuando sean muchas en número, porque desde los apóstoles, añade: Todos aquellos que las des
es siempre una en medio del gran número de ellas». precian y se separan de ellas, desprecian la verdade
Sobre el salmo 1. ra religión, y deben ser instados por los pastores y
S. Oplato Milevitano cita el mismo ejemplo para magistrados piadosos, á fin de que no persistan obsti
mostrar que el crimen del cisma es superior aun al nadamente en su separacion».
del parricidio y al de la idolatría. Observa que Cain La confesion galicana, art. 16: «Creemos que á
no fue castigado con la muerte, y que los ninivitas al nadie le es permitido el sustraerse de las asambleas
canzaron el tiempo de merecer gracia por medio de del culto, sino que todos deben guardar la unidad de
la penitencia. Mas desde que Coré, Daihan y Abiron la Iglesia...; y que todo el que se aparte de ella resiste
se emplearon en dividir al pueblo, «Dios, dice, envia al orden de Dios».
un hambre voraz á la tierra; al punto esta abre una La confesion escocesa, art. 27: «Creemos constan
boca enorme, los traga con ansia y se cierra sobre su temente que la Iglesia es una.... Detestamos entera
presa. Estos miserables, mas bien enterrados que mente las blasfemias de los que pretenden que todo
muertos, caen en los abismos del infierno».... Qué di hombre, observando la equidad, la justicia, sea cual
reis á vista de este ejemplo, vosotros, que alimentas quiera la religion que profese por otra parte, se salva
el cisma y le defendeis impunemente? rá; pues sin la fe en Jesucristo no hay ni vida, ni sal
S. Juan Crisóstomo: «Ninguna otra cosa provoca vacion, d nadie puede participar de estos dones si no
tanto la ira de Dios como el dividir su Iglesia. Aun se le ha dado á Jesucristo por su Padre.
cuando hubiéramos hecho un bien innumerable, no La confesion bélgica: «Creemos y confesamos una
pagaríamos por esto menos el haber roto la comunion sola Iglesia católica.... todo el que se aparta de esta
de la lglesia y despedazado el cuerpo de Jesucristo». verdadera Iglesia se rebela claramente contra la orde
Homilia sobre la epist. á los efesios. nacion de Dios».
S. Agustin: «El sacrilegio del cisma, el crimen, La confesion sajona, art. 8: «Nos sirve de un gran
el sacrilegio lleno de crueldad, el crimen soberana— consuelo el saber que no hay mas herederos de la vi
mente alroz del cisma, el sacrilegio atroz del cisma da eterna que los que existen en la asamblea de los
que supera á todos los crímenes. Todo el que en este elegidos, segun esta palabra: Aquellos que ha escogido
mundo separa á un hombre y le atrae á un partido los ha llamado».
cualquiera, queda convencido por este acto de ser La confesion bohemiana, art. 12: «Hemos aprendi
hijo de los demonios y homicida». Passim, «Los do do que todos deben guardar la unidad de la Iglesia....
natistas, dice aun, curan bien á los que bautizan de que nadie debe introducir en ella sectas, ni escilar
la llaga de idolatría, pero inficionados al propio tiem sediciones, sino conducirse como un verdadero miem
po, con la llaga mas fatal del cisma. Los idólatras han bro de la Iglesia en el vínculo de la paz y en la unani
sido algunas veces diezmados por la espada del Se midad de sentimientos».
ñor, mas la tierra ha tragado vivos en su seno á los Estraña y deplorable ceguedad la de estos hombres
cismáticos». Lib. 1.º contra los donat. «El cismático
el no haber sabido hacer la aplicacion de estos princi
puede muy bien derramar su sangre, pero jamás pne pios el dia que precedió á la predicacion de Lutero!
de alcanzar la corona. Permaneciendo fuera de la Lo que era verdadero cuando formulaban sus confe—
Iglesia, y despues de haber roto los vínculos de cari siones de fe y sus catecismos, tambien lo era sin duda
dad y de unidad, nada mas teneis que esperar sino igualmente entonces.
un castigo eterno, aun cuando por el nombre de Je El mismo Calvino enseña: «Que separarse de la
sucristo hubiéseis entregado vuestro cuerpo á las Iglesia es renegar de Jesucristo; que era muy nece
llamas». sario guardarse de efectuar una separacion tan crimi
Facil nos seria presentar nuevos testos en compro nal..... que no era posible figurarse atentado mas
bacion de nuestro aserto, añadiendo á los ya citados atroz, que el de violar, por medio de una pertidia sa
los de Tertuliano, Orígenes, Clemente Alejandrino, crílega, la alianza que el Hijo único de Dios se ha
 (CIS k 18 ClS
bia dignado contraer con nosotros. Inst. l. 4. Des clararon la guerra, y se han mantenido á pesar de la
venturado! Qué senteneia salió de su bocal Ella será verdadera lglesia. Les preguntaños aun una vez que
eternamente su propia condenacion . nos digan quién les ha dado la autoridad de decidir
.." Para pintar la gravedad del crimen de los cis la cuestion, mientras que la Iglesia enlera sostiene lo
máticos no haremos mas que copiar lo que dijo Bayle, contrario; quién les ha hecho jueces y superiores de
Supplem. de comment.filos., pref. OEuvr. 2, p. 108, la Iglesia, en la cual habian sido educados é instrui
col. 2. No sé, dice, donde se hallará un crimen mas dos, y quién ha mandado á la Iglesia someterse á su
grave que el de desgarrar el cuerpo mismo de Jesu decision, mientras que no quieren someterse á la de
cristo, el de su esposa que rescató con su propia san esla?
gre, de esta madre que nos engendra en Dios, que Cuando los pastores de la Iglesia reunidos en el con
nos alimenta con la leche de su inteligencia, en la que cilio de Trento y esparcidos en las diversas diócesis
no hay fraude alguno, y que nos conduce á la eterna condenaron los dogmas de los protestantes, y juzga
bienaventuranza. ¿Qué mayor crimen que el de suble ron que eran errores, estos últimos objetaron que los
varse contra semejante madre y desacreditarla por obispos católicos se hacian jueces y partes. Mas cuan
todo el mundo, hacer rebelarse á todos sus hijos con do Calvino, Lutero y sus secuaces pronunciaron des
tra ella, y si se puede, arrancárselos del seno á mi de lo alto de su tribunal que la Iglesia romana era
llares para arrastrarlos á las penas eternas, no solo una cloaca de vicios y errores, que era la Babilonia y
á ellos sino tambien á su posteridad para siempre? la prostitula del Apocalipsis, etc., no eran ellos jueces
Donde se hallará el crimen de lesa—magestad Divina y partes en esta contienda? Por qué razon se les ha de
contra el primer superior si no se encuentra en el cis permitir semejante imputacion mas bien que no á los
ma? Un esposo que ama á su esposa y que conoce su pastores católicos? Han escrito libros voluminosos pa
virtud, se considera mas gravemente ofendido por al ra justificar su cisma; jamás se han propuesto esta
gunos libelos que la hacen pasar por una prostituta, cuestion, y nunca se han dignado contestarnos á ella.
que por todas las injurias que se le dirigiesen á él La evidencia, dicen, la razon, el buen sentido, hé
Ill lSIll0. aqui nuestros juicios y nuestros títulos contra la Igle—
«De todos los crímenes en que puede incurrir una sia romana. Pero esta pretendida evidencia no ha ec
persona no hay uno mas horrible que el de sublevarse sistido ni existe aun sino para ellos, nadie la ha visto
contra su legítimo príncipe, y hacer que se rebelen sino ellos: la razon es la suya y no la de los demas; el
otras lantas provincias cuantas sea posible para pro buen sentido que reclaman no ha existido jamás sino
curar destronarles, aunque para conseguirlo fuese pre en sus cerebros. Lo que tienen de su parte es un or
ciso asolar todas las provincias que quisieran perma gullo irritante en demasia para pretender que en el
necer fieles. Pues tanto como el interés sobrenatural siglo XVI no habia nadie mas que ellos en toda la Igle
escede á toda preeminencia temporal, otro tanto lleva sia cristiana que tuviera luces, razon y buen senlido.
consigo la Iglesia de Jesucristo sobre todas las socie En todas las disputas que desde el nacimiento de la
dades civiles; por consiguiente otro tant, el cisma Iglesia se han suscitado entre ella y los novadores,
contra la Iglesia escede la enormidad de todas las se estos últimos jamás han dejado de alegar por parte
diciones». -
suya la evidencia, la razon, el buen sentido, y de de
Dailles, al principio de su Apologia por las refor— fender su causa como los protestantes defienden la su
mas, cap. 2, hace la misma confesion respecto á la ya. ¿Han tenido acaso todos ellos razon? ¿Y la Iglesia
gravedad del crimen de los que se separan de la Igle— no la ha tenido nunca? En este caso, es necesario sos
sia sin causa ninguna grave; pero sostiene que los pro tener que Jesucristo lejos de haber establecido en su
testantes las tuvieron muy poderosas para que no se Iglesia un principio de unidad, ha colocado en ella un
les pueda acusar de haber sido cismáticos. Examina principio de division para todos los siglos, dejando á
remos eslas razones despues. El mismo Calvino y sus iodos los sectarios obstinados la libertad de formar un
principales discipulos han usado de igual lenguage. bando aparte, con solo acusar á la Iglesia de que vivia
5.” Mas antes de discutir sus razones conviene en el desórden y en el error.
veamos desde luego si su conducta está conforme con Por lo demas, en semejante caso es absolutamente
las leyes de la equidad y del buen sentido. Dicen que necesario que todos los protestantes se atreviesen á
tenian derecho para romper con la Iglesia romana afirmar que la evidencia está de su parte; muchos
porque esta profesaba errores, que autorizaba supers han sido bastante modestos para confesar que sus
ticiones y abusos en los que no podian tomar parte sin razones no son mas que probables. Grocio y Vossio
renunciar á la salvacion eterna. Mas quién ha pronun habian escrito que los doctores de la Iglesia romana
ciado este juicio, y quién garantiza su certeza? ellos dan á la Escritura Sagrada un sentido evidentemente
mismos, y ellos solos. ¿Con qué derecho desempeñan forzado, diferente del que siguieron los antiguos PP.,
á la vez las funciones de acusadores y de jueces? y que obligan á los fieles á adoptar sus interpretacio
Mientras que la Iglesia católica, esparcida por toda nes, y que por consiguiente ha sido preciso sepa
la tierra, seguia los mismos dogmas y la misma mo rarse de ellos. Bayle. Dic. crit. art. Nihusius, Renn.
ral, el mismo culto y las mismas leyes que observa al H., observa que se han aventurado con demasia.
presente, un puñado de predicadores, en dos ó tres «Los protestantes, dice no alegan sino razones dis
laises de la Europa, decidieron que la Iglesia cató putables, ningun argumento convincenle, ninguna
ica era culpable de error, de supersticion y de idola demostracion: prueban y objetan, mas se les respon
tria; asi lo publicaron. Una turba de ignorantes y de de á sus pruebas y á sus objeciones; replican y se
hombres viciosos los creyeron y se unieron á ellos: les replica; esto no es concluir jamas: ¿merecia es
llegando á ser bastante numerosos y fuertes la de vo la pena de promover y sostener un cisma? Pre
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guntémoslos mas bien: en semejante circunstancia, doctrina. En todo tiempo la Iglesia ha separado de
¿era permitido levantar un cisma, y esponerse á las su sociedad á los hereges y á los incrédulos; por con
hor orosas consecuencias que han resultado de él ?» siguiente, los protestantes han debido en conciencia
Las controversias de religion, continúa Bayle, separarse de la Iglesia romana. Asi discurre Daillé,
no pueden llevarse al último grado de evidencia: Apolog., c. 3, y la turba de protestantes.
todos los teólogos están conformes en este punto. Ju Respuesta. En primer lugar, suplicamos á estos
rieu defiende que es un error muy peligroso enseñar razonadores nos digan qué respondieron á los ana
que el Espíritu Santo nos hace conocer evidentemen baptistas, á los socinianos, á los cuáqueros, á los
te las verdades de la religion; segun él, el alma fiel latitudinarios, á los independientes, etc., cuando
abraza estas verdades sin que sean evidentes á su estos último alegaron estos mismos pasajes para pro
razon, y aun sin conocer evidentemente que Dios las bar que estaban obligados en conciencia á separarse
ha rereado.» Se pretende que Lutero, en el artículo de los protestantes y formar bando á parte.
de la muerte, hizo una confesion con corta diferencia En segundo lugar, S. Pablo no se limitó á prohibir
semejante; véase pues en lo que viene á parar la á los fieles permanecer en sociedad con los hereges é
pretendida claridad de la Sagrada Escritura acerca incrédu'os, sino que los manda huir de la compañía
de las cuestiones que se han disputado entre los pro de los pecadores escardalosos I. Cor., c. 5, y 11.
testantes y nosotros. II. Thess., c. 3, y. 6 y 14; ¿se infiere, por ventura,
6." Aun hay mas; siguiendo el principio acerca de esto que todos estos pecadores deben salir de la
del cual habian los protestantes fundado su cisma ó su Iglesia para formar una secta particular, ó que la
separacion de la Iglesia romana, otros doctores se les Iglesia debe lanzarlos de su seno ? Los apóstoles en
han opuesto sosteniendo contra ellos que habian cai general han prohibido á los fieles escuchar y seguir
do en el error, y probándoles que era preciso sepa á los seductores, á los falsos doctores y á los que les
rarse de ellos. Ási Lutero vió nacer entre sus prosé prediquen una doctrina nueva; por consiguiente, te
litos la secta de los anabaptistas y la de los sacramen dos los que dieron oidos á Lutero, á Calvino y á sus
tarios, y Calvino hizo salir de su escuela los socinia secuaces han hecho todo lo contrario de lo que los
nos. En lnglaterra, los puritanos ó calvinistas rígi apóstoles mandaron.
dos ¿ quisieron fraternizar con los episcopales ó
-

En tercer lugar, ¿es posible hacer de la Sagrada

anglicanos, y otras veinte sectas salieron sucesiva Escritura un abuso mas enorme que el que hacen de
mente de este foco de division. En vano los gefes de ella nuestros adversarios? S. Pablo manda á un pre
la pretendida reforma dirigieron á estos nuevos cis lado de la Iglesia que reprenda á un herege, que evi
máticos las mismas reprehensiones que les habian di te despues su trato, y que no vuelva á verle mas si
rigido á ellos los doctores católicos; se burlaron de es rebelde y pertinaz; luego este herege hace bien en
ellos, se les preguntó con qué derecho negaban á los rebelarse contra el pastor, de pervertirle sus ovejas
demas una libertad de que habian tenido á bien usar y formar un rebaño aparte: hé aqui lo que han he
ellos mismos, y si no se avergonzaban de repetir unos cho Lntero y Calvino, y segun el dictámen de sus
argumentos á los que pretendian ellos haber respon discípulos han hecho bien; S. Pablo les ha autori
¿ con solidez. zado con su doctrina. Mas estos dos pretendidos re
Bayle no deja de hacerles tambien esta objecion. formadores ¿eran apóstoles ó pastores de la Iglesia
Un católico, dice, tiene delante de sí á todos sus universal revestidos con la competente autoridad para
enemigos, y las mismas armas les sirven para refu— declararla herética y corromperla sus hijos?
tarlos á todos; mas los protestantes tienen enemigos Por haberles agradado juzgar que la lglesia cató—
por delante y por detras; están entre dos fuegos; el lica era una Babilonia decidieron que era necesario
papismo los ataca por una parte y el socinianismo por separarse de ella; pero este mismo juicio pronuncia
otra: este último emplea contra ellos los mismos ár— do sin autoridad era una blasfemia; suponia que
gumentos de que se sirvieron contra la Iglesia roma Jesucristo, despues de haber derramado su sangre
na. Dicc. crit., Nihusius, H. Demostraremos la ver para formarse una Iglesia pura y sin mancha, per
dad de esta acusacion respondiendo á las objeciones mitió, á pesar de sus promesas, que llegase á ser
de los protestantes. una Babilonia, una cloaca de errores y desórdenes.
Primera objecion. Aunque los apóstoles hayan re Toda sociedad, sin duda, tiene derechó para juzgar
comendado frecuentemente á los fieles, la unión y la á sus miembros; pero los protestantes que lo ven to
paz, tambien los mandaron separarse de los que en do en la Escritura no han encontrado en ella mas
señan una doctrina falsa. S. Pablo escribe á Tito, que un puñado de miembros revoltosos con derecho
c. 3, y. 10. «Huye tambien de tratar con el que es para juzgar y condenará la sociedad entera. Pueden
herege, despues de haberle corregido una ó dos ve aprender de la Escritura que un pastor, un obispo,
ces.» S. Juan no quiere que ni aun se le salude. 2." tales como los de Efeso y Pérgamo, están autorizados
Joan, y . 10. S Pablo anatematiza á todo el que pre para separar de su rebaño á los nicolailas condena
dicase un Evangelio diferente del suyo, aun cuando dos como hereges por los apóstoles; mas nunca ha
fuera un angel del cielo; Gálat., c. 10, y.8 y 9. enseñado que los nicolailas ó los partidarios de cual
Leemos en el Apocalipsis, c. 18, y. 4: «Sal de Ba— quiera otra secta pudiesen oponerse á los obispos y
bilonia, pueblo mio, para que no seas participante formar una Iglesia ó una sociedad cismática.
de sus crímenes y de su castigo.» En este mismo li De que la Iglesia católica, haya separado siempre
bro, c. 2, y . 6, el Señor alaba al obispo de Efeso, de su seno á los hereges, á los incrédulos y rebeldes,
porque este aborrece la conducta de los nicolaitas; y se infiere que tuvo mas razon para tratar así á los
en el y . 15 vitupera al de Pérgamo porque tolera su protestantes y pronunciar contra ellos el anatema; pe
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ro no se sigue que hayan obrado bien en pronunciar— bando aparte á fin de poder servir á Dios segun las
le ellos á su vez contra la Iglesia, usurparla sus títu - luces de su conciencia.
los y levantar altar contra altar. Es estraño que se Respuesta. Antes de levantar sus clamores Lutero.
mejantes raciocinios tan torpes hayan podido hacer Calvino y algunos olros predicantes, nadie, en toda
impresion en un solo espíritu sensato. - la eslension de la Iglesia católica, consideraba su cul
Segunda objecion. Los prelados y doctores católi to como una idolatria; aun estos doctores lo habian
cos no se contentaban con enseñar errores, autorizar practicado durante largo tiempo sin escrúpulo; ellos
supersticicnes y mantener abusos, sino que ademas fueron los que á fuerza de declamaciones y de sofis
¿ á los fieles á abrazar todas sus opiniones, mas llegaron á persuadírselo á una turba de ignoran.-
y castigaban con suplicios á todo el que tratase de tes; ellos son pues la causa de la falsa conciencia de
oponerlos residencia; por tanto no era posible conti sus prosélitos. Aun cuando estos últimos fuesen ino
nuar viviendo en sociedad con ellos: ha sido de todo centes respecto á haber formado un cisma, lo que no
punto necesario abandonarlos. es cierto, los autores del error fueron seguramente
Respuesta. Es falso que la Iglesia católica haya en los mas culpables; mas S. Pablo manda á los fieles
señado errores, etc., como igualmente que haya obedecer á sus prelados y cerrar los oidos á la seduc
obligado por medio de suplicios á los fieles á profe cion de los falsos doctores; por tanto estos últimos y
sarlos. Dígase de una vez, ¿quién ha convencido á sus discípulos han sido cómplices del mismo crímen.
la Iglesia de haber caido en algun error? Porque Aunque se nos quiera persuadir de que la preten
Lutero y Calvino la hayan acusado falsanente de dida reforma tuvo por primeros partidarios á unas
error, ¿se sigue que esto sea cierto? Ellos mismos almas timoratas, á cristianos escrupulosos y piadosos
fueron quienes enseñaban errores y quienes los ha que solo trataban de servir á Dios segun su concien
cian abrazar á otros. Asi como alegaban algunos pa cia, no podernos menos de conocer que lo que se de
sajes de la Sagrada Escritura, los doctores católicos sea es burlarse de nuestra credulidad. Demasiado
les citaban tambien los mismos pasajes para probar probado está que los predicantes eran, ó bien ciertos
su doctrina; los primeros decian: Vosotros enten religiosos disgustados del cláustro, del celibato y del
deis mal la Escritura, y los segundos respondian: yugo de la regla, ó bien eclesiásticos viciosos, desar
Vosotros mismos sois los que pervertís su sentido. reglados y aferrados en su pretendida ciencia; que la
Nuestra esplicacion es la misma que dieron en todo multitud de sus partidarios ha sido unos hombres de
tiempo los PP. de la Iglesia y la que han seguido malas costumbres y dominados por fogosas pasiones.
siempre todos los fieles; la vuestra no tiene mas fun Véase REForuA. No es menos cierto qne el principal
damento que sobre vuestras pretendidas luces: es motivo de su apostasía fue el deseo de vivir con mas
nueva é inaudila, por consiguiente es falsa. Una de libertad, robar las iglesias y los monasterios, humi
las razones que prueba la mala inteligencia por par llar y destruir el clero y vengarse de sus enemigos
te de los protestantes, respecto á la Sagrada Escritu personales, etc.: todo era permitido contra los papis
ra, es que no se conforman en un solo punto de doc las á los que seguian el nuevo Evangelio.
trina, en vez de que el sentir de los católicos siem Se nos engaña todavia mas groseramente cuando
pre ha sido unánime. Otra prueba de que los prime se pretende asegurar que era necesario tener valor
ros enseñaban errores es que al presente sus discí para renunciar al catolicismo, en cuyo caso habia que
pulos y sus sucesores no siguen su doctrina. Véase esponerse á graves peligros, que los apóstatas arries
PRoTESTANTE. gaban su fortuna y su vida, y que por tanto no pu
Ademas, una cosa es no creer y no profesar la doc dieron obrar sino por motivo de conciencia. Es cons
trina de la Iglesia, y otra cosa es el atacarla públi tante que los pretendidos reformadores trabajaron
camente y predicar lo contrario. Jamas podrán los desde un principio para hacerse temibles. Sus docto
protestantes citar el ejemplo de un solo herege ó de res no les ¿ la paciencia, la dulzura y la
un solo incrédulo ajusticiado por errores que no ha resignacion al martirio, como hacian los apóstoles con
ya publicado ni querido hacer abrazará otros. Es un sus discípulos, sino la sedicion, la revolucion, la vio
equívoco fraudulento el confundir á los incrédulos lencia, el pillaje y el asesinato. Estas lecciones se
acíficos con los predicantes sediciosos, logosos y ca— encuentran todavia en los escritos de los reformado
umniadores, tales como lo fueron los fundadores de res, y atestigua la historia que fueron fielmente se
la pretendida reforma. ¿Quién ha obligado á Lute guidas. Estraña y ridícula delicadeza de conciencia
ro, Calvino y á sus prosélitos á erigirse en apóstoles, que prefirió trastornar la Europa entera mas bien
á echar por tierra la religion y la creencia estableci que sufrir en silencio los pretendidos abusos de la
das, y llenar de invectivas á los pastores de la Igle Iglesia católical -

sia romana? Hé aqui su crímen, y jamas sus secua Cuarta objecion. A la verdad, los PP. de la Igle
ces llegarán á justificarlos. sia condenaron el cisma de los novacianos, de los do
Tercera objecion. Los protestantes no podían vivir natistas y de los luciferianos, porque estos sectarios
en el seno de la Iglesia romana, sin practicar los usos no imputaban ningun error á la Iglesia católica, de
supersticiosos que en ella se observaban, sin adorar la que se separaban; mas no acontecia lo mismo á los
la Eucaristía, sin tributar un culto religioso á, los protestantes, á quienes la doctrina de la Iglesia ro
santos, á sus imágenes y á sus reliquias; miraban mana pareció errónea en muchos puntos.
todos estos cultos como otros tantos actos de idolatría. Respuesta. Es falso que los cismáticos de quienes
Aun cuando se engañasen en el fondo, nunca p0dian hablamos no hayan imputado ningun error á la Igle
observarse estas prácticas sin obrar contra su concien sia católica. Los donatistas miraban como un error el
cia; por consiguiente se vieron obligados á formar pensar que los pecadores escandalosos eran miembros
 CIS 2 (2 3
de la iglesia; sostenian ademas la nulidad del bau profesaron con unánime consentimiento». ... a regla
tismo recibido fuera de su sociedad. Los novacianos constantemente seguida en la Iglesia hace mas de ti z
defendian que la lglesia no tenia facullad para absol y siete siglos, es la condenacion forma del cisina y de
ver á los pecadores culpables de reincidencia. Los lo la la conducta de los protestantes, como tambien
luciferianos enseñaban que no se debia recibir en la de los demas sectarios.
comunion eclesiástica á los obispos arrianos, aun Algunos teologos distinguieron el cisma actiro y
cuando hiciesen penitencia y se convirtieran, y que pasiro; entienden por el primero la separacio volun
el bautismo administrado por ellos era absolutamen - laria de una parte de los miembros de la Iglesia d.
te nulo. Si para tener derecho de separarse de la cerpo, y la resolucion que forman entre sí de no
Iglesia bastara impularla errores, no habria secta al asociarse con él en lo sucesivo; llaman cisma pasiro á
guna antigua ni moderna á la que se pudiera acusar la, separacion involuntaria de aquellos á quienes a
con justicia de cisma, y los misinos protestantes no se Iglesia ha desechado ó arrojado de su seno por medio
atreverian á vituperará ninguna de las sectas que se de la excomunion. Algunas veces los controversistas
han separado de ellos, puesto q e á todas sin escep— protestanles han querido abusar de esta distincion:
cion las han afeado ciertos errores, y recuentemente dijeron: no henos sido nosotros quienes nos hemos
errores muy groseros. separado de la Iglesia romana, ella es la que nos ha
En efecto, los socinianos los acusan de introducir desechado y condenado; luego ella es la cilpable del
el politeismo y adorar tres dioses, defendien lo la di cisma, y no nototros. Mas está probado por todos los
vinidad de las tres personas divinas; los anabaptistas, monumentos históricos de aquellá época y por todos
de profanar el bautismo administrándole á unos niños los escritos de los luleranos y calvinistas, que antes
que son todavia incapaces de creer; los cuáqueros, de del analema pronunciado contra ellos por el Concilio
resistir al Espíritu Santo impidiendo ó prohibiendo á de Trento, ya habian publicado y repetido cien veces
los simples fieles y á las mujeres hablar en las asam que la Iglesia romana era la Babilonia del Apocalip
bleas de religion cuando unos y otros estan inspira sis, la sinagoga de salanás, la sociedad del antecris
dos; los anglicanos, de desconocer la institución de to, que era absolutamente indispensable separarse de
Jesucristo, rehusando reconocer el carácter divino de ella para alcanzar la salvacion: en su consecuencia
los obispos: y todos de concierto acusan á los calvi tuvieron desde luego asambleas particulares, evita
nistas rigidos de que hacen á Dios autor del pecado ron hallarse en las de los católicos, y de tomar parte
admitiendo la predestinacion absoluta, etc.; luego, ó en su culto. Por tanto el cisma fue activo y muy vo -
todas estas sectas tienen razon para vivir separadas luntario por su parle.
unas de otras y anatematizarse mútuamente, ó todas No preten demos insinuar con esto que la Iglesia no
han obrado injustamente en promover el cisma con la deba escluir prontamente de su comunion á los nova -
Iglesia católica; no hay una sola secta que no alegue dores ocultos, hipócritas y pérfidos, que enseñando
las mismas razones para separarse de cualquiera otra una doctrina contraria á la suya se obstinan en lla
comunion. marse católicos, hijos de la Iglesia, y defensores de su
Uno de sus controversistas ha cilado un pasage de verdadera creencia, á pesar de los i. solemnes
Vicente de Lerins, el cual dice, Commonit., cap. que los condenan. Una triste esperiencia nos conven
y 29, que si algun error está próximo á inestará ce de que estos hereges ocultos y falaces no son menos
ioda la Iglesia, es preciso en tal caso alenerse á la peligrosos, y no hacen menos mal que si fueran ene—
antigüedad; pero que si el error es antiguo y estenso migos declarados.
se le debe combatir con la Escritura. Esta cita es falsa; Se llama en teologia proposicion cismática, la que
hé aqui las palabras de este autor: «Siempre ha sido, tiende á inspirar á los fieles la rebelion contra la Igle.
y es todavia al presente la costumbre entre los católi sia, á introducir la division entre las Iglesias parti
cos el probar la verdadera fé de dos maneras: 1.” por culares y la de Roma, que es el centro de la unidad
la autoridad de la Sagrada Escritura: 2.” por la tra católica.
dicion de la Iglesia universal, no porque la Escritura CISMA DE INGLATERRA. Véase INGLATERIA.
sea insuficiente por sí misma, sino porque la mayor CISMA DE LOS GREGOS. Véase GRIEGo.
arte interpretan á su gusto la palabra divina, y asi CISMA DE OCCIDENTE. Fue la division que
orjan opiniones y errores. Por consiguiente es nece acaeció en la Iglesia romana en el siglo XIV, cuando
sario entender la Sagrada Escritura en el sentido de hubo dos papas co'o ados á un mismo tiempo en la
la Iglesia, con especialidad en las cuestiones que sir Santa Sede, de modo que no era facii distinguir cuál
ven de fundamento á todo el dogma calólico. Tambien de los dos habia sido elegido canónicamente.
hemos dicho que en la Iglesia misma es preciso aten Despues de la muerte de Benedicto XI, en 130%,
derá la universalidad y a la antigüe la l; á la univer hubo en el pontificado sucesivamente siete papas
salidad, á fin de no romper la unidad por medio de de origen francés, á saber, Clemente V. Juan XXII,
un cisma, y á la antigüedad, á fin de no prefe ir una Benedicto XII, Clemente VI, Inocencio Vl, Urbano V,
nueva heregía á la antigua religion. Finalmenle, he Gregorio X, los cuales tuvieron su silla en Aviñon,
mos dicho que en la antigüedad de la Iglesia se deben Este último, habiendo hecho un viage á Roma c y ó cn.
observar dos cosas: 1." lo que ha sido decidido en otro fermo en esta ciudad, donde murie el 13 de marzo
tiempo por un concilio universal; 2." si hay una cues: de 1378. El pueblo romano, muy sedicioso en aque
tion nueva acerca de la cual no recayó anterioriente a época, y envidioso por tener allí al soberano pon
decision alguna, es preciso consultar el Senlir de los lice, se reunió tumultuosamente, y con un tonoame—
PP, que vivieron y enseñaron siempre en la con inion nazador declaró á los cardenales reunidos en cónclave
de la Iglesia, y tener por verdadero y católico lo que qie queria un papa romano ó al menos italiano de
T OMIO l.
 CiS 422 CIS
...«auento. En consecuencia los cardenales, despues blanco y lo negro segun las circunstancias. Es cierto
de haber proleslado contra la violencia que se les que el cisma causó escándalos, produjo abusos y dis
hacia, y contra la eleccion que se iba á hacer, eli ninuyó mucho los sentimientos religiosos; pero el
gieron el 9 de abril á Bartolomé Prignago, arzobispo mal no fue ni tan escesivo ni de tanta estension como
de Bari, el cual tomó el nombre de urbano V. Mas pretenden los enemigos de la Iglesia. En esta misma
cinco meses despues, estos mismos cardenales, reti— época hubo tambien en todas las naciones católicas,
rados en Anaghi y despues á Fondi, en el reino de en las diversas obediencias de los papas y en los di—
Nápoles, declararon nula la eleccion de Urbano VI, ferentes eslados de la vida un gran número de per
como hecha por violencia, y eligieron en su lugar á sonages distinguidos por su saber y por sus y itides.
Roberto, cardenal de Ginebra, el cual tomó el nom El mismo Mosheim cita un buen número de dichos
bre de Clemente Vll. personages que vivieron tanto á fines del siglo XIV
Este último fue reconocido como papa legítimo por como á principios del XV, y conviene en que hubiera
la Francia, la España, la Escocia, la Sicilia, la isla p0dido añadir otros varios. Los pretendientes al pon
de Chy pre, y estableció su residencia en Aviñon: á tificado fueron vituperables por no haber querido sa
Urbano VI, que residia en Roma, le prestaron obe crificar su interés particular y el de sus hechuras al
diencia los demas estados de la cristiandad, Esta di. bien general de la Iglesia; sin embargo no se les pues
vision, á que se llamó el gran cisma de Occidente, de acusar de haber sido unos hombres sin religion y
duró por espacio de cuarenta años. Pero ninguno de sin costumbres. Los de Aviñon, reducidos á una renta
los dos partidos era culpable de desobediencia á la muy corta, hicieron para sostener su dignidad un
Iglesia, ni á su gefe; uno y otro deseaban igual tráfico vergonzoso de los beneficios eclesiásticos, y se
mente conocer el verdadero papa, enteramente dis— les vió colocarse sobre toda regla; por cuya razon en
puestos á tributarle obediencia desde el momento en la Iglesia de Francia debió ser mas sensible el desor
que fuese ciertamente conocido. den. Sin embargo, por la Historia de la Iglesia ga
Durante este intervalo, Urbano VI tuvo por suce licana vemos que el clero no estaba allí general
sores en Roma á Bonifacio IV, Inocencio VII, Gre mente ni en la ignorancia ni en una corrupcion in
gorio XII, Alejandro V y Juan XXIII. La silla curable, puesto que se hizo uso de las quejas del mismo
de Aviñon fue ocupada por Clemente Vll durante clero para probar la magnitud del mal.
diez y seis años, y durante veinte y tres por Bene Ademas, exagerando los protestantes las funestas
dicto XIII su sucesor. En 109, el concilio de Pisa consecuencias del cilado cisma, nos parece que van
reunido para estinguir el cisma no pudo conseguir su directamente contra el interés de su sistema; prue
objeto; en vano depuso á Gregorio XII, pontífice de han, sin querer, de cuánta importancia es en la Igle
Roma, y á Benedicto XIII, papa en Aviñon; en va sia el gobierno de un superior sabio, ilustrado y vir -
no eligió en su lugar á Alejandro V; todos tres tuvie— tuoso, puesto que cuando llega á faltar este auxilio,
ron partidarios, y en vez de dos competidores hu todo viene á parar en desorden y confusion. Los hom
bo lres. bres de buen sentido, dice Mosheim, aprendieron que
Por fin, este escándalo cesó el año 1 17; en el con se podia pasar sin un gefe visible, revestido con una
cilio general de Constanza, reunido con este objeto, supremacía espiritual; se puede pasar sin duda, cuan
Gregorio XII renunció al pontificado, Juan XXII, que do se quiere trastornar el dogma, la moral, el culto
habia reemplazado á Alejandro V, fue obligado á que y la disciplina, como lo han hecho los protestantes;
le imitase, y Benedicto XIII fue depuesto solemne— pero cuando se quieren conservar todas estas cosas,
mente. Se eligió á Martino V, el cual fue poco á po— tales como los apóstoles las establecieron, se siente la
co reconocido universalmente, aunque Benedicto XIII necesidad de un gefe; una esperiencia de diez y sie
vivió todavia cinco años, y se obstiñó en conservar el te siglos ha debido bastar para enseñarlo.
nombre de papa hasta la muerte.
Los protestantes, demasiado solícitos en renovar Citacion de la Escritura Santa. V. Es
todos los escándalos acaecidos en la Iglesia romana, CRITURA SANTA.
ecsageraron las desgracias que produjo este último;
dicen que durante el cisma se apagó en muchas par— Claraculares. V. ANABAPTISTAs.
les ¿ sentimiento de religion dando márgen á los
mas escandalosos escesos; que el clero perdió hasta Clara ó Clarisa (Religiosa de santa).
las apariencias de religion y de decencia; que las #º: eclesiástico). Se da este nombre á una Orden
personas virtuosas fueron alormentadas por las du de religiosas que viven bajo la regla de san Francisco
das y desasosiegos. Añaden que esta division de los de Asis.
ánimos produjo, sin embargo, un escelente efecto, Esta Orden, la mas austera de todos los monas
pues que causó un golpe mortal á la potestad de los terios de monjas, fue fundada en el siglo XIII, al
papas. Mosheim, Hist. ecles, siglo decimocuarto, 2." mismo tiempo que la de los religiosos menores.
parte, c. 2, S. 15. Clara, natural de Asís en la Hungría, animada con
Este cuadro podia semejante si se le com el ejemplo de su compatriola Francisco, concibió el
para con muchos de los escritos compuestos durante designio de ejecutar para las personas de su sexo
el cisma por ciertos autores apasionados y salíricos, la misma fundacion que él. Tomó el hábito religio
tales como Nicolas de Clemengis y otros varios, Mas so de mano de aquel santo patriarca, y luego im
al leer la historia de los tiempos de que hablamos, se taron su ejemplo otras muchas, observando la re
ve que no son mas que declamaciones dictadas por la la mas austera. Se fundó su primer monasterio en
pasion, en las cuales se encuentran frecuentemente lo a Iglesia de san Damian, de donde tomaron el nom
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bre de diamanistas. Urbano IV mitigó su primera naturaleza, sino por adopcion. Véase ADopcIANos.
regla, porque le pareció muy dura y muy penosa; Colocado Claudio en la silla de Turin por Luis el De
ero hubo algunas que conservaron la primera. A bonario el año 823, empezó por hacer romper y que
¿ que conservaron la antigua observancia las lla mar las cruces y las imágenes que se hallaban en las
man clarisas, y urbanistas á las que adoptaron la re iglesias; sostuvo que no se les debia dar ningun cul—
gla Imitigada. to, y menos á las reliquias ; tambien fue acusado de
Las clarisas profesan la pobreza mas rigorosa: ayu negar que se debe honrar á los santos y de vituperar
nan todo el año, andan casi siempre descalzas, sin las peregrinaciones á los sepulcros de los mártires:
sandalias ni zapatos, su hábito es de una sarga gris decia, que el apostólico ó el papa no es el que ocupa
burda, por debajo de la cual llevan un cilicio: guar— la silla del apostol, sino el que cumple sus deberes;
dan un silencio perpétuo, y no se saludan cuando se error que se renovó por los valdenses á fines del si
encuentran mas que con estas palabras: Ave-María; glo XII.
por lo cual las han dado el nombre de las monjas del Por estas hazañas Claudio de Turin ha merecido
Ave-Maria; las reciben sin dole; renuncian á toda ser colocado por los protestantes en el número de sus
especie de rentas, y viven solo de limosnas; llevan predecesores y de aquellos á quienes llaman los testi—
el cordon de la Orden Tercera para denotar que son gos de la verdad. Mosheim habla de él con el mayor
hijas de S. Francisco; estan, bajo la direccion de los aprecio; pondera los comentarios de este obispo so
religiosos de este santo, y tienen repartido el tiempo bre la sagrada Escritura y su capacidad en el modo
de dia y de noche en rezar el oficio divino, en la de esplicarla; dice que por su noble valentia en de -
oracion y en los ejercicios mas humildes. fender la religion este sabio y venerable prelado cayó
Las urbanistas deben sn origen á Isabel de Fran— en el odio de los hijos de la superstición; pero que
cia, hermana de S. Luis, que fundó en el año 1255 defendió su causa con tanta destreza valentia, que
el monasterio de Longs-Champs, cerca de París, con quedó triunfante y adquirió mas crédito que nunca.
el nombre de la Humildad de nuestra Señora. Al Hist. eccles, siglo IX, 2.º parte, c. 2, S 1 , c. 3,
principio adoptaron la regla de Santa Clara; pero S. 17: Basnage ha hecho de él un elogio todavia mas
despues fue - mitigada por los papas Urbano IV y completo.
Eugenio IV, en todo idéntica á la de los religiosos Pero si se quiere echar una mirada sobre el modo
menores; pueden comer carnes en los dias ordina— con que este pretendido sabio defendia su causa, se
rios, y se les quitó la ley del silencio que se les ha verá que raciocinaba muy mal y que suplió con un
bia impuesto; llevan un hábito de sarga gris ceñi tono de altivez y de arrogancia la debilidad de sus ar—
do con un cordon blanco; y en el coro, y cuando gumentos. Si es cierto que cuando ocupó la silla de
estan de ceremonia, se ponen un manto de la misma Turin, halló el culto de las imágenes y de los santos
tela que el hábito. Las postulantes ó pretendientas llevado por el pueblo hasta la supersticion y la idola
tienen que hacer pruebas de ser de una familia hon tria, no podia instruir á sus ovejas sin caer en
rada, y pagan una suma de dinero para entrar. (Es— otro esceso? Esto es lo que dijeron el abate Teode
tracto del Diccionario de Jurisprudencia). miro, el monge Dungal, Jonás, obispo de Orleans, y
Walafrido Strabon que escribieron contra él. Distin
Claretas. Casa de religiosas de la Orden del guen, como nosotros ahora, el culto divino y supre
Cister y de la reforma de la Trapa, fundada por Go mo ó la adoracion propiamente dicha, que únicamen
dofredo, tercer conde del Perche, y erigida en aba te es debida á Dios, y el culto relativo é inferior que
dia el año 1221. Estas religiosas tienen por inmedia se dá á los santos, á las imágenes y á las reliquias; y
tos superiores á los abades de la Trapa, é imitan la lo fundan en la práctica constante y universal de la
vida de los religiosos. Iglesia, contra la que los sofismas de Claudio de Turin
Parece á primera vista que la austeridad de vida y sus declamaciones no prueban nada. Véase Fleury,
de las clarisas, de las cartujas, de las claretas, etc. Hist. eccles. l. 6, S.20 y 21; l. 8, S. 7.
debia aterrar y disgustar á las jóvenes que tienen vo Los protestantes tienen gran cuidado de guardar
cacion al estado religioso; mas sucede lo contrario: silencio sobre los demas errores que Claudio habia
los conventos mas austeros son los que con mas faci recibido de Felix de Urgel, su maestro, y que con
lidad proporcionan motivos de contento á las religio razon lo han hecho sospechoso de nestorianismo. El
sas y son tambien aquellos en que viven mas largo pretendido triunfo que le atribuyen no fue mas que
tiempo. Los filósofos consideran este fenómeno como ejar algunos discípulos que no han sido capaces de
un efecto del entusiasmo y de la locura; parécenos restablecer su memoria. La mayor parte de sus escri
mas justo y racional el tenerlo por un efecto de la tos no se han impreso, y parece que la religion ni las
gracia. El entusiasmo pasa y se disipa, en vez de que letras no han perdido nada.
el fervor de una buena religiosa vemos que persevera Para hacer la apologia de este obispo contra las
mientras vive. acusaciones de Bossuel, observa Basnage: 1.° Que
Claudio de Turin no podia será la vez arriano y nes—
Clauditamistas. Rama de los donatistas que toriano. No pone atencion en que el error de Felix de
tenian por gefe á cierto Claudio, del que nada ños Urgel, del que era discípulo Claudio de Turin, es una
dice la Historia Eclesiástica. V. DoNAtistas. especie de medio entre el arrianismo y el nestorianis
mo; porque en fin, si Jesucristo en cuanto hombre no
Claudito de Turin. Era español de nacimien— es Ilijo de Dios por naturaleza, es, ó porque el Ver—
to y discípulo de Felix de Urgel, que sostenia que bo no es verdaderamente Dios, como lo sostenian los
Jesucristo, en cuanto hombre, no era hijo de Dios por arrianos, ó porque entre la humanidad de Jesucristo
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y el Verbo divino º solamente una union moral y
ño sustancial, como la enten dia Nestorio. No es mas
iglesias, y á los que las daban un culto supersticioso.
Doscientos años antes S. Gregorio Magno habia hecho
sorprendente que unos hayan acusado á Claudio de lo mismo, escribiendo á Sereno, obispo de Marsella.
Turin de arrianismo y otros de nestorianismo. 2." Di Aunque los obispos del concilio de París hubiesen in
ce que este obispo admitia dos iglesias: la una ador terpretado mal el sentido de las espresiones del se
nada de todas las virtudes, era el cuerpo de Jesucris gundo concilio de Nicea, del papa Adriano y de los
to; la olra se unia solamente al nombre de Jesucristo griegos en general, el papa Eugenio II creyó deber
sin tener virtudes completas y perfectas. Pregunta uardar silencio, esperando que este error se disipase
mos á los protestantes á cuál de las dos creen perte sí mismo, como sucedió en efecto. Pero cuando
necer; es bien cierto que S. Pablo no ha conocido mas los papas han levantado la voz contra los errantes, los
que una sola Iglesia. 3." Claudio de Turin hacia igua protestantes declaman contra su celo; cuando han
les á S. Pablo y á S. Pedro, y no reconocia mas gefe contemporizado y tolerado algunos abusos, deducen
de la lglesia que á Jesucristo; pero al menos no decia que los han aprobado. ¿Cómo satisfacer á semejantes
como los protestantes que el papa es el antecristo. Censores?
.." Era celoso partidario de la doctrina de S. Agus Basnage vá mas allá: piensa que los habitantes de
tin sobre la predestinacion y la gracia, y se le acu los valles del Piamonte conservaron preciosamente la
saba de no apreciar á ningun otro Padre; al menos doctrina de Claudio de Turin; que deben haber man
no lachaba de error á los demas PP., como hacen los tenido la sucesion en su Iglesia; que debe conside
rotestantes. 5.º No admitia los méritos de los hom rárseles como un canal por el que la verdad oprimida
res: decia que si Jesucristo no ha sacado ninguna en otros lugares ha pasado á los siglos siguientes. Pe
loria de sus acciones, con mucha mas razon los hon ro á poco mas del siglo IX hasta el XVI, y en este in
¿ no deben referir á ellos mismos las que hacen térvalo hubo en Turin obispos que no pensaban como
buenas. Pero los católicos dicen lo mismo, sin des— el de que hablamos, y no han acusado á sus ovejas
echar por esto el mérito de las buenas obras. Véase de cismáticas y heréticas. Lo esencial para los pro
MERito. 6.º Sostenia que uno se salva por sola la fé, testantes seria el probar que aquellos que adoptan por
y no por las obras de la ley; sin embargo, ecsigia las / antepasados sostenian el principio fundamental de la
cenas obras. Si por la ley entendia como S. Pablo reforma, que es que un cristiano no debe tener mas
la ley mosáica, tenia razon; nosotros pensamos como regla de fé que la Escritura Santa; en esto es en lo
él; si entendia la ley de Jesucristo, se contradecia ue no han pensado Basnage y los demas. Hist. de la
como los protestantes, y desechaba como elios la doc glesia, t. 2, p. 1306 y 138.
trina de Santiago. Véase Jes rificAcioN. 7 º No que
ria que se rogase por los muertos, porque cada uno Claustro. En general significa un monasterio de
debe llerar su carga, y que si pudiésemos ayudarnos personas religiosas de uno ú otro sexo, y algunas ve
los unos á los otros en esta vida, ni Job, ni Noé, ni ces se toma por la vida monástica; en este sentido se
David, pueden rogar por las almas cuando se han dice que se puede conseguir la salvacion mas facil
presentado ante el tribunal de Jesucristo. Ezeq. c. 1, mente en el claustro que en el siglo.
3. 1 y 18. Este sofista ponia á S. Pablo en contra La mayor parte de los claustros han sido en otro
diccion consigo mismo. Gálat. c. 6, y. 2 y 5, dice tiempo, no solamente casas de piedad, sino tambien
este apostol: Llevad la carga los unos de los otros: escuelas en que se enseñaban los idiomas y las artes
el Pasage de Ezequiel está muy mal aplicado en este liberales del todo descuidadas en otras partes. Beda
lugar. Véase ORAdioN poR Los D:FUNTos. 8." Claudio hist. lib. 3, cap. 3 iros enseña que Oswald, rey de In
de Turin no admitia la presencia real de Jesucristo glaterra hizo muchas donaciones á los claustros á fin
en la Eucaristia, ni la transustanciacion, puesto que de que la juventud fuese bien educada en ellos. La
dijo que Jesucristo ha referido místicamenle el vino á riqueza de los monasterios no tiene pues un origen tan
su sangre. Quisiéramos saber si Basnage ha entendido odioso como quieren atribuirla los críticos modernos.
la palabreria y las frías alegorias que cita con motivo Los claustros de S. Dionisio en Francia, de Saint
de Claudio de Turin; es evidente que este sofista no Gall en Suiza y otra infinidad de ellos en los cuales
se en tendia á sí mismo. habian sido educados los hijos de los reyes, fueron no
En fin, rompió las imágenes, condenando la idola solo ricamente dotados con este laotivo, sino tambien
tria de los que las ador aban. Si por adoracion se en muy privilegiados, y en particular con el derecho de
tiende un culto absoluto y supremo, seria en efecto un asilo. Servian tambien de reclusion sobre todo á los
acto de idolatria el dárselo á las imágenes; pero puesto príncipes depuestos ó escluidos del trono. La historia
que el mismo Basnage ha observado que adorar no Wizantina y la de Frania nos su ministran frecuentes
significa muchas veces mas que hacer la recerencia ó ejemplos de esto mismo.
ates iguar el respeto, ¿por qué insistir siempre sobre
este termino equívoco, que ocasionó todas las disputas 33 Claustro. (Derecho canónico). Es la parte de
del siglo X? un monasterio construida en forma de galeria ó pór
Sin embargo, Basnage triunfa de que su héroe no tico, que tiene cuatro la los por lo regular, con un
fue condenado ni por el papa, ni por ningun concilio; jardinó patio en medio, encima del cual estan los
y dedice de esto que al menos en Francia todo el mun dormitorios. Se aplica tambien esta voz á un recinto
do eslaba en la misma creencia que Claudio de Turin. de casas donde viven los canónigos de las iglesias
Deberia de acordarse que este obispo escribia en 823, catedrales ó colegiatas y los canónigos de algunos
y que en 825 el concilio de París cóndenó igualmente cabildos. Tambien se entiende por claustro la vida
á los que rompian las imágenes ó las quitaban de la monástica religiosa. Antiguamente los que profesa
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ban la vida monástica se obligaban á la clausura per— 126, despues de haber hablado de las dos cartas de
pétua cuando entraban en el recinto destinado pa S., Clemente, añade : «Se podria reprender en ellas:
ra vivir encerrados los religiosos; pero ya en el dia 1.” Que admite mundos mas allá de Occéano.
esta clausura no entra necesariamente en los votos 2.” Que usa el ejemplo del fénix como un hecho cier
de la profesion religiosa, á lo menos entre los hom lo. 3." Que se limita á dar á Jesucrist) los títulos de
bres, esceptuando solo algunos monasterios donde se pontífice, de gefe, de señor, sin añadir á ellos otros
conserva el fervor de los primeros tiempos de la vi mas eminentes que caracterizan su divinidad, á la
da monástica. Por lo que hace á las mugeres, tie que nada dice, sin embargo, que le sea contrario».
nen todavia que guardar la clausura perpetua en los Estas réplicas de Focio son sin duda los caracteres
mas de los conventos, aunque hay algunas otras re— de ignorancia que el autor de la memoria ha juzgado
ligiosas que hacen votos y no estan sujetas á clau indignos de S. Clemente.
sura. Aunque los religiosos de uno y otro sexo, que Desde luego es claro que Focio no desecha la 2."
no estan obligados á la clausura, pueden salir, tie carta de este papa mas que sobre la opinion de otro;
nen que pedir licencia á los superiores; es decir, que que su crítica recae igualmente sobre las dos; pero no
unos y otros no pueden hacerlo sin pedirla de an es muy dificil satisfacer á sus cargos.
temano, y sino se la conceden y salen sin el permi Platon, Aristóteles, Plinio , Eliano habian en
so tienen que sufrir el castigo designado en la re trevisto lo mismo que S. Clemente, que hay mundos
gla ó en las constituciones de la Orden, porque fal— ó mas bien tierras habitadas mas allá del Occéano;
tan al voto de obediencia, que es la base de la subor esta es una verdad que los descubrimientos moder—
dinacion monástica. nos la han confirmado. Resulta de esto, que ha sido
No se permite á los forasteros entrar en los monas una injusticia el repetir tan frecuentemente en nues—
terios donde se observa la clausura, y mucho menos tros dias, que todos los PP. de la Iglesia han negado
se permite entrar en los conventos de religiosas á los antípodas. Orígenes, lib. 2, de Princip., c. 3, se
ningun hombre ó muger. Esta misma prohibicion se funda en el pasaje de S. Clemente para admitirlos, y
observaba antiguamente con respecto á los monges; S. Hilario habla de ellos in Ps. 2. n. 23.
mas en el todos los religisos pueden salir, No solo S. Clemente, Epist. 1 , n. 25, sino Oríge
igualmente se les permite á los hombres entrar en sus nes, Tertuliano, S. Cirilo de Jerusalen, Lactancio,
conventos; pero las mugeres no pueden hacerlo en Eusebio, S. Gregorio Nazianceno, S. Ambrosio, San
los monasterios donde la observan con todo su vigor Epifanio, Sinesio y otros han citado el ejemplo del
como antiguamente: sin embargo, esta prohibicion fénix como un modelo de la resurreccion general;
solo es local y varia en cada diócesis. Su infraccion nosotros no vemos en qué hayan pecado. En su tiem
en los puntos donde está en su vigor esta clausura es po el hecho del fénix pasaba por cierto; Herodoto,
un caso reservado al obispo diocesano. (Estracto del Plutarco, Plinio, Séneca, Pomponio Mela, Solino,
Diccionario de Jurisprudencia). Filostrato , Libanio, Tácito , etc. han hablado de
él como los PP. de la Iglesia. Diestros críticos han
Clausura de las religiosas. Véase RELI dudado si en el libro de Job no era necesario tra
GIOSAS. ducir el y . 18 del c. 29 de esta manera: Espiraré en
mi nido, y como el feniar multiplicaré mis dias. Véase
Cleme ancia de Dios. Véase MisERIcon DIA. la nota de Fell sobre el n. 25 de la 1.° epístola de san
Clemente.
Clemente (San), papa, murió á fines del si Este santo pontífice concluyó su 1.º carta diciendo
l; es uno de los PP. apostólicos. Nos quedan de que por Jesucristo, Dios tiene la gloria, el poder, la
l dos cartas á los Corintios, de las que la 1" no está magestad y un trono eterno antes y despues de los
entera, y sobre la autenticidad de las cuales ha habi siglos: ¿y cómo esto, si el mismo Jesucristo no es
do dudas. co-eterno á Dios? Al principio de la2.º le llama á Dios
En las Memor. de la Acad. de las Inscrip. tom. 27, juez de los vivos y de los muertos. Ha profesado, pues,
en l.”, p. 95, se ha colocado el estracto de una claramente la divinidad de Jesucristo.
memoria sobre las obras apócrifas supuestas en los Conviene tambien saber que S. Dionisio de Co—
primeros siglos, y en él se dice: 1.° Que Eusebio, rinto, 70 ú 80 años despues en una carta al papa
S.Gerónimo y Focio desechan absolutamente la 2." Sotero, atestigua que desde tiempo inmemorial se
carta de S. Clemente. 2." Que la 1.º tiene caracteres leia en su Iglesia la carta que S. Clemente le habia
de ignorancia que no se le pueden atribuir á este dirigido, Euseb. Hist. ecles. l. , c. 14. S. Ireneo juzga
santo pontífice. Esta censura, copiada de los proles que es muy enérgica y apremiante. Ado. Haeres, li
tantes, no nos parece justa. bro 3, c. 3. S. Clemente de Alejandria la cita lo me
Eusebio, Hist. ecles. lib. 3, c. 36, dice solamente nos cuatro veces eu sus Stromatas. Orígenes hace
que la 2.º carta de S. Clemente no es tan conocida mencion de ella, lib. 2 de Princip. c., 3, y en su co
como la 1.º; esto no es desecharla absolutamente. mentario sobre S. Juan. Eusebio atestigua que no se
S. Gerónimo en su catálogo de los escritores eclesiás duda de su autenticidad. S. Cirilo de Jerusalen, San
ticos, dice á la verdad, que la 2." de las cartas atri Epifanio y S. Gerónimo manifiestan que hacen un
buidas á S. Clemente está desechada por los anti gran aprecio de ella. Se halla pues á cubierto de
guos; pero no se sabe quiénes son estos antiguos de toda sospecha. El sabio Ladner, Credibility, etc.,
que S. Gerónimo quiere hablar; no se halla ninguno t. 3, juzga de este modo de ella; piensa que fué es—
que se haya espresado antes. Focio, cod. 113, dice crita hácia el año 96 de nuestra era , inmediatamente
tambien que está desechada como supuesta; pero cod. despues de la persecucion de Domiciano.
 CL, 426 CLE

En cuanto á la 2.", si se quiere tomar el trabajo Convenimos en que este Padre es muchas veces
de ver el juicio que Cotelier ha hecho de ella, PP. obscuro, y que es dificil entender el verdadero senti
Apost: t. 1, p. 182, se verá que las opiniones de San do de lo que dice, pero los filósofos que copia ó que
Gerónimo y de Focio no son sentencias irrefragables; refuta no lo eran menos; sin embargo, cualquiera que
que esta carla no tiene en sí ninguna señal de supo— se tome el trabajo de leerle se admirará de su vasta
sicion; que si ha sido desechada por los antiguos, esto erudicion, de las grandes ideas que habia concebido
significa que no la han querido admitir como escritu de la inisericordia divina, de la eficacia de la re
ra canónica, y no que la han considerado como un dencion y de la santidad que debe procurar tener
escrito falsamente atribuido á S. Clemente. Ambas es un cristiano. Juzgó á los paganos, que conocia perfec
tan colocadas en el número de las escrituras canóni tamente, con menos severidad que otros Padres, pero
cas en el canon 76 de los apóstoles no disimuló sus errores ni sus vicios. Focio le acu
No sucede lo mismo con las Recogniciones, las ho sa de haber enseñado errores monstruosos en sus li
milías llamadas Clementinas, las Constituciones apos bros de Hypotyposes que no han llegado hasta nos
tólicas y una liturgia que se ha dado con el nombre otros; pero se debe creerá Focio, cuando se halla
de este papa. Todos convienen en que estas son obras una doctrina contraria en las obras que nos quedan
supuestas en los siglos posteriores; hablaremos de de S Clemente? Algunos antiguos creyeron que los he
ellas en sus títulos particulares; pero no se deben en reges habian alterado muchas de estas obras; pero
volver en la misma proscripcion las obras verdade Focio pudo engañarse por un ejemplar tambien fal
ras y documentos falsos. Miuchos críticos modernos sificado. Eusebio, S. Gerónimo, S.Epifanio, S.Ci
han creido que este P. apostólico habia citado un -rilo, Teodorelo, etc., todos capaces de juzgarle, ha
pasaje del Evangelio apócrifo de los egipcios demos— cen completa justicia al mérito de S. Clemente.
traremos lo contrario Véase Egipcios. Pero los críticos modernos no han sido tan impar
En 1751 y 1752 el sabio Walstein ha publicado ciales: muchos le han acusado de haber dicho con
dos nuevas epístolas atribuidas á S. Cemente, que palabras terminantes que Dios es corporal. Lo con
han sido descubiertas hace poco; pero muchos críti trario dice en las Strom. l. 5, c. 1. SegunS. Clemente
cos han disputado ya su autenticidad. los estóicos decian que Dios y el alma son de una na
turaleza compuesta de cuerpo y espíritu; encontra
Clemanente de Alejandria. Pilósofo eclép— reis esto dice en nuestras Escrituras; pero añade
tico, ó que no estaba unido á ninguna secta, fue que los estóicos no han comprendido bien su sentido.
discípulo y sucesor de Panteno en la escuela de Ale En efecto, los estóicos consideraban á Dios como el
jandria; tuvo en ella por oyentes á Orígenes y Ale alma del mundo; segun este sistema, Dios estaba re
jandro, obispo de Jerusalen, , y murió á principios vestido de un cuerpo lo mismo que el alma humana.
del siglo III. La mejor edicion de sus obras es la dada pero, continúa S. Clemente, no decimos como ellos que
por Polier en Oxford en 1715, en folio. Se reimprimió Dios toda la naturaleza ; decimos que la ha
en Venecia en 1758. creado con su palabra. Refuta despues á Aristóleles, y
Diciéndonos él mismo que vió y oyó á los suceso demas filósofos que admitian dos principics, el espíri
res inmediatos de los apóstoles, Sirom. lib. 1, p. 322, tu y la materia ; dice que Platon solo admitia uno y
sus escritos merecen la mayor atencion. En su Ec que esta materia imaginaria se forjó sobre el dicho
hortacion á los gentiles se propuso demostrar lo ab de la Escritura: La tierra se hallaba sin forma y sin
surdo de la idolatria, de las fábulas del paganismo, orden, etc. -

En su erhortacion á los gentiles c. 1, p. 35. «En

y de lo que de ellas han dicho los filósofos y los poe
tas. Sus Stromatas ó misceláneas son una mezcla de seña que la creacion del mundo es la sola voluntad de
la doctrina de los filósofos comparada con la del Dios, que solo él lo ha hecho todo, porque solo él es
Evangelio. En el tratado titulado Qué rico se salva verdadero Dios; que solo obra su voluntad, y que el
rá? Demuestra que no es necesario renunciar á las ri— efecto sigue á su querer». Es imposible atribuirá Dios
¿ para salvarse, con tal que se haga buen uso de una manera mas enérgica el poder creador. Aho
e ellas. El Pedagogo es un tratado de moral en el ra bien, este poder únicamente puede convenir á un
que se describe el modo de vivir de los cristianos espíritu puro. Como Platon, solo admite un primer
fervorosos en los primeros tiempos, Escribió otras principio de todas las cosas que es el espíritu. Dice
muchas obras de las que solo quedan fragmentos. en otro lugar Paedag. l. 1, c. , p. 10 , que Dios es
S. Clemente de Alejandria es uno de los Padres de uno y superior á la unidad; esto seria falso si fuese
la Iglesia contra los que mas se han ensañado los crí corporal.
ticos antiguos y modernos. Dicen que no solo sus obras Le Clerc en su arte crítica l. 3, p. 12, se ha empe
carecen de método, su estilo es descuidado , sus ra ñado no obstante en sostener que S. Clemente de Ale
zonamientos vagos y obscuros, sus interprelaciones jandria supuso la eternidad de la materia, puesto que
de la Sagrada Escritura frecuentemente falsas, sus no refutó espresamente á Platon y á los demas filóso
máximas de moral ecsageradas, sino que su doctrina fos que admitian una materia eterna; pero lampoco re
no es ortodoxa. futó espresamente á Heráclito que sostenia la eterni
Scultet, Daillé, Le Clerc, Mosheim, Brucker, Sem dad del mundo y de esto se ha de inferir que San
ler, Barbeyrac han repetido los mismos cargos y se han Clemente incurriese en el mismo error?
complacido en ecsagerar las faltas verdaderas ó apa Que admitiese ó no las ideas eternas de Platon, que
rentes de este doctor venerable; nuestros incrédulos afirmase que este filósofo las habia tomado de Moisés,
modernos no han hecho mas que copiar á todos estos nada se sigue de esto. Esta opinion no lleva ninguna
censores protestantes. -
consecuencia contraria al dogma del cristianismo.
 CLE (27) CLE
Cuando llama al alma del hombre el espiritu cor S. Clemente pensase como estos, puesto que muchas
poral entiende el espíritu revestido de un cuerpo hu veces combate sus máximas.
0.

mano, y no una materia sutil como afectan entender ...”. Otro crítico dice que este Padre exhortaba á
Bayle, Beausobre, Dargens y sus copistas Cuando un los cristianos al martirio, á ejemplo de los antiguos
autor se ha espresado una vez, es absurdo argumen paganos que se daban la muerte. Esta es una ca—
tar contra él sobre una palabra. umnia. S. Clemente dice, por el contrario, que los que
Otra injusticia de parte de Le Clerc es querer per buscan la muerte no conocen á Dios, y solo tienen de
suadir que S. Clemente de Alejandria no se esplicó cristianos el ñombre. Tacha de temerario al que sin
de una manera ortodoxa sobre la divinidad del Verbo; necesidad se espone al peligro; dice que presentán—
Bullus vindicó á este Padre, Defens. fidei. Nicaen. dose á los jueces se hace reo de homicidio, y contri
sect. 2.° cap. 6; y por Bosuel en su 6." Advert. á los huye en cuanto puede á la injusticia de los persegui—
protestantes, n. 79. dores; que si los irrita, está én el mismo caso que el
Este mismo crítico metió mucho ruido porque S. Cle que provoca á un animal feroz. Strom, l. , n. y 10,
mente y otros muchos Padres, engañados por la ver página 571, 597. Barbeyrac le acusa tambien por esta
sion de los Setenta, creyeron que los ángeles tuvie— decision, y sostiene que S. Clemente la prueba con
Il tle W dS TaZ0 n (ºS. -

ron comercio con las hijas de los hombres, y que en

gendraron los gigantes; convenimos en ellº, pero no este5.Padre
En fin, asegura y se esfuerza en probar que
quiso justificar la idolatria de los paganos.
vemos que este error haya podido ser tan peligroso.
Véase ANGEL. En el pasaje que cita Barbeyrac, solo dice S. Clemente
Otros han dicho que S. Clemente no admitió el peca que segun la intencion de Dios era para los paganos
do original. No solo lo admite, sino que lo prueba por un mal mucho menor adorar el sol y la luna que es—
las palabras de Job, c. 14, y. y 5, segun los Seten tar sin divinidad ó ser enteramente ateos, puesto que
Su veneracion por los astros debia conducirlos al co—
ta. Nadie está libre de mancha aunque únicamen -
te hubiere vivido un solo dia. Segun él, cuando David nocimiento del Criador. Pero añade que á menos que
no se hubieran
dijo: Fuí concebido en la iniquidad y formado en pe— porque pudiendoarrepentido se condeñaran, los unos,
creer en Dios no quisieron; los otros,
cado en el seno de mi madre, ps. 50, y.5, hablaba porque aunque quisieron no hicieron todos los esfuer
de Eva en un sentido profético, Strom, l.3, c. 16, p. zos necesarios para ser fieles. Strom., l. 6, c. 14.
556 y 557; pero se incomoda contra los quededucian páginas 795, 796.
de aqui que la procreacion es un pecado, y condena Despues de haber reconocido que las palabras de
ban el matrimonio. -

S. Clemente de Alejandria son frecuentemente oscu—

Un cargo mas grave que le hace Barbeyrac es de ras, es imprudente querer juzgar sus sentimientos por
haber enseñado muy mal la moral. Despues de dará un solo pasaje.
su modo un estracto del Pedagogo de S. Clemente de 6." Otros le han echado en cara haber creido en
Alejandria, le acusa primero de haber escrito con la salvacion de los paganos virtuosos, y haber abierto
poco orden y de no haber hecho de la moral un sistema asi el camino al pelagianismo. Para disculpar á este
metódico. Cuando nos demuestren qué nuevas virtu Padre, basta comparar su dictámen con el de Pelagio.
des han hecho nacer entre nosotros los sistemas me—
Este herege sostenia que un pagano podia salvarse
lódicos de moral producidos por los modernos filóso— sin gracia por el mérito de las virtudes que practica
fos, qué vicios han corregido, consentiremos en re con solo las fuerzas naturales. Hacia consistir toda
conocer la falta de los Padres de la lglesia, y sentire la gracia de la redencion en que Jesucristo nos dió lec
mos que Jesucristo y los apóstoles no compusiesen por ciones y ejemplos de virtud; en esta hipótesis es in
sí mismos tratados metódicos y razonados para santi dudable que un pagano que no conocia á Jesucristo
ficar las costumbres. ninguna gracia recibia de él. Luego si se salvaba se
2.º, Barbeyrac dice que S. Clemente de Alejandria ria sin que Jesucrislo tuviese ninguna parte en su sal
no habló de los deberes que solo concerniesen á Dios; vacion. Hé aquí lo que S. Agustin ha echado conti
sin embargo, este Padre insistió en sus obras muchas nuamente en cara á los pelagianos. «Cómo, dice, el
veces sobre la necesidad de adorará Dios en espíri que se alreve á prometer la salvacion á alguno sin Je
tu y en verdad, como hacian los cristianos, de creer sucristo puede esperar él mismo salvarse por Jesu
en su palabra, de ser reconocidos á sus beneficios, de cristo?» Serm.29%, c. ... n. 4.
resignarse á las órdenes de su providencia y some Es esta la opinion de S. Clemente de Alejandria?
terse á las leyes que nos prescribió en el Evangelio. Dice que el Verbo de Dios tiene cuidado de todas las
Nos parece que estos deberes tienen relacion directa criaturas, y hace en la naturaleza humana el oficio de
con Dios. médico. Pardag., l. 1, c. 2, p. 101. Segun Pelagio, la
3.º Segun este mismo censor, S. Clemente trató de naturaleza humana no tenia necesidad de médico pues
inspirar á los cristianos la apatia de los estóicos, que to que no está enferma. En las Stromatas, l. 6, c. 13,
riendo que un gnóstico, es decir, un cristiano perfecto, página 793, enseña S. Clemente que no hay mas que un
estuviese esento de pasiones. Cuando se le quiere juz solo testamento de salvacion que nos viene únicamente
gar con un poco de imparcialidad, se conoce º eS de Dios por un solo Señor, pero que obra de diferentes
le Padre solo exige que ún cristiano reprima de mo maneras; luego no admite una salvacion sin Jesucris
do sus pasiones que parezca que no las tiene. Aun to. Dice que Dios solo Todopoderoso y bueno quiso dar
cuando con este motivo hubiera repetido alguna de de siglo en siglo la salvacion por su Hijo, l. 7, c. 2, pá
las espresiones de que se servian los estóicos, no se gina 831 y sig., etc. Para encontrar alli el pelagianis
podriá deducir de ello, como lo hace Barbeyrac, que mo es necesario suponer como los pelagianos que Je
 CLE 428) CE
sucristo no dá gracia alguna á los que no le conocen; dos al servicio divino; se deriva del griego KLERos,
este es un error que jamás los PP. han admitido, y 8uerte, porcion, herencia. En el antiguo Testamento
que siempre combatieron con todas sus fuerzas; en se llama á la tribu de Levi la porcion ó herencia del
señando lo contrario refutaron de antemano á los pe Señor. Aunque puedan considerarse lo mismo todos
lagíanos. los cristianos, los que ha escogido y consagrado este
Nos ha parecido tanto mas necesariojustificar á San especialmente para su culto, son en un sentido mas ri
Clemente de 4 lejandria, cuanto que los cargos que le goroso su porcion y su herencia, y al abrazar es
han hecho los protestantes son mirados por nuestros lado los misinos, hacen profesion de tomar al Señor
incrédulos comio objeciones sin réplica y decisiones por su parte y su herencia. Cuando un clérigo recibe
irrefragables. El Padre Ballus ha demostrado su fal la tonsura pronuncia estas palabras del salmo 15;
sedad en su Defensa de los santos Padres acusados de «El Señor es la porcion de herencia que me ha cabido
platonismo, l. , etc. en suerte; vos sois, Dios mio, quien me la dá.» San
Pedro dá ya el nombre de clérigo ó de clero á los que
Clementinas. Son mnas cartas, homilías ó bajo el poder de los obispos se emplean en el santo
discursos y una historia de los hechos de S. Pedro, ninisterio neque dominantes in cleris, 1, Petr., c. 5,
falsamente atribuidos al Papa S. Clemente, y que pa . 3.
rece ser obra de algunos hereges. No se hace mencion Muchos críticos protestantes han defendido que la
de él antes del siglo IV. Véanse los PP. apost. de Co distincion entre los clérigos y los legos mo era conoci—
telier, l. 1. da en la primitiva Iglesia, que no empezó hasta el
Mosheim en sus disertaciones sobre la Historia ecle siglo III. Se les ha probado con las cartas de S. Cle—
siástica, l. 1, p. 577 y sig., cree que esta obra se es mente, papa, con las de S. Ignacio, con S. Clemente de
cribió al principio del siglo III; esto es darle mucha Alejandria, que esta distincion tuvo lugar desde el
antigüedad; opina que su autor era un filósofo de tiempo de los apóstoles. Bingham, Orig. ecles., l. 1,
Alejandria, medio judio y medio cristiano; pero á esta capítulo 5, S.2, t. 1, p. 2. Dodwel primera disertacion.
conjetura añade otras muchas que son muy dudosas. Algunas veces los autores eclesiásticos han desig
Véase tambien su disertacion de turbata per recen nado bajo el nombre de clérigos á los ministros de la
tiores platónicos Eclesia, n. 3 y sig. Iglesia inferiores á los diáconos; es decir, los subdiá
No se deben confundir con estos documentos apó— conos, los lectores, etc. Los clérigos en general eran
crifos las decrelales de Clemente V, llamadas lambien tambien llamados canónicos ó canónigos, porque sus
Clementinas, quecomponen partedel derecho canónico. nombres estaban inscritos en un cánon ó catálogo de
cada iglesia.
* Clementinos. Hubo entre los antironcor Por esto se distinguian de los legos, que se les lla
datarios hombres tan ciegos y exagerados, que pu maba seculares ó idiotas; es decir, personas privadas
sieron en duda la legitimidad de los papas posterio ó simples particulares. Bingham, ibid.
res á S. Clemente, al que pretendieron referirse para Los que han estudiado la antigua disciplina de la
volver á entrar en el orden legítimo de la sucesion Iglesia han observado la sabiduria de las precaucio
apostólica. Por esto tomaron el nombre de sacerdotes nes que se tomaban para asegurarse de la fé, de las
clementinos. costumbres y del estado de los que se elevaban al cle
ricato. Los soldados, los siervos, los actores de tea
Cleobianos. Secta de simonianos en el siglo I tro, los que estaban encargados de los tribulos públi
de la Iglesia. Murió casi en su nacimiento. Hegesipo cos, los bigamos, todos aquellos cuya condicion y
y Teodorelo que nos hablan de ella no especifican qué profesion no eran honestas no podian aspirar á en
opiniones distinguian á los cleobianos de los demas si - trar en el clero. Habia leyes severísimas para conser—
monianos; se cree que tuvieron por gefe un tal Cleobio, var entre los clérigos la regularidad de las costum
compañero de Simon. Habia compuesto con este he bres, la decencia, la paz, la asiduidad en cumplir sus
resiarca libros bajo el nombre de Jesucristo para en funciones; penas para castigar las desobediencias y
gañará los cristianos. IIegesip0, apud. Euseb., l. , prevenir los menores abusos. La mayor parte de los
capítulo 22 Constit. apost., l. 6, c. 8 y 16, concilios se reunieron con este objeto, y hay que sen
Se vé que los falsos doctores contrarios á los após tir en esto que las reglas que dieron no han sido siem
toles no han descuidado ningun artificio para impe pre observadas con mucha exactitud. Bingham, l. ,
dir el resultado de su predicacion; que si hubiese sido y 6; Fleury, Costumbres de los cristianos, n. 32.
posible el acreditar de falsedad á los apóstoles sobre En todos los pueblos civilizados se ha conocido que
cualquier hecho ó punto de doctrina, la multitud de cualquiera ciudadano no era á propósito para desem
hereges que levantaron el estandarte contra ellos peñar las funciones públicas del culto divino; que este
ciertamente que hubieran conseguido su objeto. Sin ministerio respetable debia confiarse á un cuerpo
embargo, todas estas sectas se han disipado, se han particular de hombres que hiciesen de él su estudio y
destruido las unas á las otras, la verdad ha triunfado
su ocupacion: en este punto ha sido una misma la
de ellas. Prueba evidente de que el cristianismo es conducta de los egipcios, de los judios, de los griegos
deudor de sus resultados, no á la ignorancia ni á la y de los romanos.
docilidad de los pueblos, sino á la certeza indestruc En el cristianismo era esto todavia mucho mas ne
tible de los hechos sobre que se halla establecido. cesario: 1.º Para enseñar una religion revelada es
esencial la mision, y Dios la dá á quien le place; Jesu
ciero, Clerecía. Se comprende bajo estenom cristo no la dió sino á sus apóstoles y á sus discípulos.
bre á todos los que por su estado se hallan consagra— 2." Las facultades de estos ministros son sobrenatu
 CLE 429 CLE
rales, no pertenece á cualquier fiel el perdonar los troducidas, parece no haber tenido lugar mas que en
pecados, consagrar el cuerpo y la sangre de Jesucristo algunas iglesias de Africa, y no fue imitado sino por
etc. 3.º La multitud de funciones de que están encar Pablo Somosatense, Dodwel, Disert. 3, Cipriano, etc.;
gados ecsige que se entreguen á ellas enteramente; so y en el dia se habla de él como de un desarreglo ge
lo el estudio de los dogmas y de las pruebas de la reli neral del clero de aquel tiempo. Tambien lo es el que
gion, los ataques que se han dado á esta doctrina, rer probar la corrupcion de los eclesiásticos por las
el modo como se debe defenderla bastan para ocupar leyes que se hicieron para prevenirla; un solo crimen
á un hombre toda su vida..." Los trabajos apostólicos averiguado ha bastado para alarmar el celo de los
de las misiones deben continuarse hasta el fin de los obispos, y para obligar á los concilios á proscribirla.
siglos; son necesarios hombres libres de cualquier otro Porque S. Pablo hizo la enumeracion de los vicios á
empeño y sienpre preparados para llevar la luz del ¿ un ministro de los altares podia estar sujeto, ¿de
Evangelio á paises lejanos. uciremos que habia ya entonces obispos y sacerdo—
Asi lo pensó nuestro divino legislador. Dijo á sus tes viciosos?
apóstoles que los sacó del mundo, que no pertenecen ..". Es una prueba de prevencion y preocupacion
ya á este mundo, etc. Ellos mismos se han considerado dar fé á lo que los historiadores han dicho de los
como hombres de Dios, dedicados únicamente á su vicios de algunos eclesiásticos, y negar toda creen
servicio y á la salvacion de sus hermanos. Sus pri cia al testimonio que han dado de las virtudes y de la
meros discípulos S. Clemente y S. Ignacio distinguie santidad de los demas. En todos los tiempos ha ha
ron claramente los obispos, los sacerdotes, los diáco— bido escándalos, y los habrá siempre : Jesucristo, lo
nos y nos enseñaron la gerarquia como establecida predijo; pero ha habido tambien grandes virtudes: los
por los apóstoles. Esta disciplina no ha variado nun protestantes no hablan mas que del mal, lo buscan
ca. No es este el lugar de desenvolver todas estas con diligencia y lo exageran; no tienen en cuenta las
ruebas, ni de responder por menor á todas las suti acciones virtuosas, las pasan en silencio, ó empon
ezas por las que los luteranos y los calvinistas han zoñan el motivo de ellas, han dado este bello ejemplo
procurado estraviar las consecuencias. Han sido re á los incrédulos: tambien han procurado hacer de sus
futados no solo por los católicos sino por los angli aseclesiásticas olras tantas crónicas escanda
canos que han conservado la gerarquia. OS3S.
Pero no podemos dispensarnos de poner á la vista 5." Es justo atribuir á los malos ejemplos del
de los lectores el cuadro que la mayor parte de los clero una corrupcion de costumbres que ha venido
protestantes han trazado de las costumbres del clero evidentemente de otra causa, de la irrupcion de los
en todos los siglos, desde el nacimiento de la Iglesia bárbaros, de la ignorancia y de los desórdenes que se
hasta el de la pretendida reforma; su designio ha sido siguieron de ella? Revolucion terrible que cambió la
probar que era indispensable su separacion de los faz de la Europa entera, por la que fueron arrastrados
prelados católicos; que no habia otro medio de cor los eclesiásticos lo mismo que los legos y que faltó poco
regir los vicios y los abusos; veremos si han conse ara destruir absolutamente el cristianismo. Por no
guido demostrarlo. Empecemos por algunas reflecsio ablar mas que de nuestros climas desde el siglo IX
nes generales sobre la injusticia de su procede; estas ha habido tres ó cuatro pestes generales en Francia;
servirán tambien para demostrar la temeridad de los en el VIII y en el IX los normandos, los sarracenos y
incrédulos que repiten los mismos cargos. los húngaros llevaron la desolacion casi á toda la Eu
1.". Es una injusticia el pretender que la santidad ropa. En estos tiempos de destruccion es imposible que
del ministerio eclesiástico convierte en otros hombres se haya guardado con rigor la disciplina, y que no se
á los que están encargados de él, y sofoca en ellos relajen las costumbres entre los ministrosdela religion.
¿ imperfecciones de la humanidad; que Jesu 6." ¿Es justo en fin acusar con tanla acritud al
cristo ha debido perpetuar en ellos por la ordenacion el clero católico de vicios de los cuales los reformadores y
mismo prodigio que obró en sus apóstoles con la ve sus discípulos han sido por lo menos tan culpables,
nida del Espíritu Santo. Si hubiera querido que los mientras que se trata de paliarlos y escusarlos en es
hombres fuésen gobernados por ángeles, sin duda que los últimos?
los hubiera enviado; pero los mismos ángeles no es— Hé aquí lo que tenemos que echar en cara á los
tarian á cubierto de los ataques de la malignidad de protestantes, y particularmente á Mosheim, que es en
los incrédulos. Estos han dirigido contra los apóstoles el dia su oráculo. Es notable el retrato que ha hecho
y contra el mismo Jesucristo la mayor parte de las de los eclesiásticos en todos los tiempos: en cada si
calumnias que se han forjado contra sus sucesores. glo de su historia eclesiástica hay siempre un artículo
2." Es una impiedad el querer persuadirnos que de vicios del clero, nunca habla en ella de virtudes,
en el segundo ó en el tercer siglo, Jesucristo ha sido in Basnage no ha sido mas justo.
fiel á las promesas que habia hecho á su lglesia y que Mosheim empieza por que en el siglo I en
en vez de darla pastores capaces de santificarla, ha tiempo de los apóstoles, los eclesiásticos no tenian
dejado caer su rebaño en manos de lobos voraces, que ninguna superioridad de orden, de carácter ni de au
no eran á propósito mas que para corromper la fé y toridad sobre los simples fieles; que los sacerdotes
las costumbres. eran solamente los ancianos, y los obispos simples
3." Es un absurdo argumentar sobre hechos par— celadores; ¿ el gobierno de la Iglesia era entonces
ticulares, sobre algunos desórdenes ocurridos entre puramente democrático, tal como ha agradado á los
el clero de una sola iglesia, y deducir que el mis— protestantes establecerlo; hecho enteramente falso con
mo escándalo reinaba en todas las demas partes. En iradicho por el Evangelio y por lascartas de de S. Pablo.
el siglo III el abuso de las agapetas, ó mugeres in V. GobieaNo ECLrsiástico, GERARQUIA, LEves, etc. De
NOMO la t50
 (CLE (430 CLE

aqui es sin embargo de donde parten Mosheim y Bas tivo ó por apego á la doctrina, á las lecciones y á la
nage para hacer invectivas contra el clero. práctica de los apóstoles. ¿Debian dejar á los malos
Desde el siglo II, dicen, ó mas bien inmediata— filósofos y disputadores temerarios dogmatizar á su
mente despues de la ruina de Jerusalen, el año 70, gusto? En estos tiempos de persecucion muchos mi
los doctores cristianos persuadieron al pueblo que los nistros de la Iglesia se vieron obligados para subsis
ministros de la lglesia cristiana habian sucedido en tirá ejercer artes, oficios ó hacer algun comercio;
carácter, en derechos, en privilegios y autoridad, á otros se vieron reducidos á huir y espatriarse, pudie
los sacerdotes judios: los obispos reunidos en concilio ron sufrir sus costumbres, pero lo que dicen Orígenes,
se tomaron el derecho de hacer leyes y de sujetar Eusebio y otros no prueba que la corrupcion fuese
á ellas á los fieles: no se les puede escusar, dicen toda general en los miembros del cuerpo eclesiástico, como
via, mas que en la rectitud de sus intenciones. pretenden los protestantes; estos autores no habian
Asi, los doctores cristianos de aquel tiempo eran recorrido todas las iglesias del mundo para saber lo
S. Clemente de Roma, S. Ignacio, S. Policarpo, dis— que pasaba en ellas.
cípulos inmediatos de los apóstoles, y cuyas cartas En el siglo IV despues de la conversion de Cons—
tenemos: estos son los que empezaron á cambiar el go tantino, los obispos frecuentaron la córte, llegaron á
bierno que Jesucristo habia establecido, y S. Juan, que ser ricos y poderosos; se apoderaron de todo el go—
vivia todavia, sufrió esta prevaricacion sin quejarse y bierno de las iglesias, quisieron dominar en los con
sin advertirlo; el Espíritu Santo que habia recibido, cilios; los emperadores se mezclaron en los asuntos
no le reveló los males que debian seguirse de este ger eclesiásticos; los papas se hicieron importantes por la
men de ambicion ¿? entre los obispos, del que sin riqueza de su iglesia; los obispos de Constantinopla
embargo, si creemos á Mosheim y sus iguales, se han hicieron lo mismo; todos imitaron el lujo y el fausto
originado todos los vicios del clero y todas las pla de los grandes de la tierra; los principales quisieron
gas de la Iglesia. ser patriarcas á fin de adquirirse un nuevo grado de
En efecto, dice, que en el siglo III S.Cipriano y autoridad y no cesaron de disputar sobre los límites
otros obispos se abrogaron toda la autoridad, despo de su jurisdicion.
jaron de ella á los sacerdotes y al pueblo: que de aqui Algo hay de cierto en estas acusaciones, pero tam
nacieron el lujo, la molicie, la vanidad, la ambicion, bien es absurdo sacar una consecuencia general de
los odios y las disputas entre los pastores; que la cor algunos hechos particulares. No vemos que los obispos
rupcion se apoderó de todos los miembros del cuerpo del Africa, de España, de las Galias, de lnglaterra
eclesiástico. Cita en prueba de esto á Orígenes y á Eu hayan frecuentado mucho la córte de los emperadores:
sebio: podia añadirá ellos el mismo S.Cipriano, que ¿qué prueba contra ellos el fausto de algunos obispos
reprendia á los pastores sus disputas y demas vicios orientales? Los que dieron en este capricho fueron
en que habian caido antes de la persecucion de Dio— muy mal notados por los escritores eclesiásticos, prue.
cleciano. En este mismo tiempo es cuando S. Cipria ba que ese desórden no era muy comun. Es necesa—
no levantó la voz contra los desórdenes de los cléri rio no olvlar que el IV siglo ha sido el mas notable
gos que vivian con mugeres, ó con pretendidas vírge por la multitud de grandes y santos obispos que apa
nes que tenian en su compañía. reciero?aun en Oriente: la mayor parte habian sido
Desde luego es dificil comprender cómo los sa monges y conservaron en la silla episcopal la pobre
cerdoles y el pueblo, despojados de su antigua autori za, la sencillez y la austeridad de la vida monástica.
dad, vinieron á ser mas viciosos; la ambicion de los Por esto mismo es por lo que desagradan á los protes
obispos no podia influir mas que sobre sus costum - lantes.
bres y no sobre las del clero inferior. No se concibe Estos censores estravagantes no pueden sufrir ni
mejor cómo la ambicion, origen de todos los vicios, se la vida un poco mundana de algonos obispos, ni las
ha podido conciliar en S.Cipriano , con la pureza y costumbres austeras y mortificadas de otros, ni las
austeridad de costumbres de que hizo profesion ¿es á apacibles virtudes del mayor número, ni el celo activo
él á quien se puede echar en cara el lujo, la inoli. y laborioso de los que ocupan los primeros lugares. Por
cie y la corrupcion? Si desde aquel tiempo las costum otra parte ya tenían los pastores de 2.° orden coro—
bres de los clérigos empezaban á corromperse, los epíscopos que desempeñaban en los pueblos del cam
obispos no obraban mal en tratar de reprimir este des po las mismas funciones que ejercen hoy dia los cu—
orden con las leyes: es un deber que S. Pablo les ha ras; las faltas de sus superiores no deben recaer sobre
bia prescrito en sus cartas á Tito y á Timoteo. Los ellos. Por último, el pueblo era el que elegia los obis
decretos dados en los concilios del segundo y del ter— pos; es dificil creer que ordinariamente escogiese
cer siglo no consideraban solamente á los simples á hombres viciosos.
fieles y á los clérigos inferiores, sino á los mismo obis A principios del siglo V, los bárbaros esparcidos
pos; lo vemos en aquellos decretos que se llaman cá en el Occidente se establecieron en él. Se dice que sus
nones de los apóstoles; ¿es por ambicion por lo que los reyes aumentáron los priveligios de los obispos por un
obispos imponian el yugo de una severa disciplina? resto de su supersticion, y en virtud del respeto que
Hubo en estos dos siglos divisiones, cismas, here— habian tenido á los sacerdotes de sus dioses. ¿Pero es
gías; se disputó sobre la celebracion de la Pascua, cierto que no se tenia en cuenla para nada el mérito
sobre el rigorismo escesivo de los novacianos, sobre personal de los obispos? Los santos Remigio de Reims,
los errores de los gnósticos, de los marcionitas, de los German de Augerre, Loup de Troyes, Enguero de
maniqueos, etc.; pero los autores de estas heregías y Leon, Agnan de Orleans, Sidonio, Apolinar de Cler
de estos cismas no fueron obispos, estos se opusieron mont, Mamerto de Viena, Honorato é Hilario de
á ello; la cuestion es saber si lo hicieron por mal mo Arlés, etc. eran entonces la gloria, del clero de las
-
 CLE 431) CLE
Galias; su virtud y no su fausto imprimió el res fue lo mismo en todas las demas partes; para reme—
peto á los bárbaros aun antes de su conversion; y diarlo se sacaron á los monges de su claustro, y se les
estos santos obispos eran demasiado celosos para to confió el gobierno de las iglesias; Carlo-Magno fue el
lerar en los eclesiásticos el lujo, la arrogancia, primero en hacer justicia á los talentos y á la virtud.
la avaricia, el libertinage, de que sin pruebas y fal El Venerable Beda, Egiberto, obispo de York, Alcui
tando á la verdad, les acusa Mosheim. Cuando dice no, preceptor de Carlo—Magno, S. Bonifacio, arzobispo
que todos estos obispos no fueron tenidos como santos de Maguncia, S.Crodegando obispo de Metz, Theo—
ni respetados sino por la ignorancia de los pueblos, dulfo obispo de Orleans, S., Paulino de Aquileya,
olvida que en Occidente el siglo V ha sido el mas Ambrosio, Autperto, Pablo diácono, etc., se distin
esclarecido de todos, y él mismo dá las pruebas. His guieron por su celo y por sus trabajos. Si sus escritos
toria eclesiástica siglo V, 2." parte, c. 1 y 2. Cuando no son modelos de elocuencia y erudicion, respiran
acusa de orgullo á S. Martin porque elevó el sacerdo al menos la piedad mas sincera.
cio sobre la dignidad real, y á S. Leon de una am Se cree que las donaciones que fueron hechas á las
bicion sin límites porque sostuvo los derechos de su iglesias eran un efecto de la ambicion de los cléri
silla, se muestra tan mal juez de la virtud como de los gos, que enseñaban que era el mejor medio de bor—
talentos. - rar los pecados; nosotros pensamos lo contrario, que
Pretende que durante el siglo VI, los eclesiásticos la mayor parte eran restituciones. Muchas veces la
no pensaron en establecer sino supersticiones lucrati cláusula tan comun en los títulos pro remedio ani—
vas, que están probados sus desórdenes por la multi mae mae, no significa para alcanzar el perdon de mis
tud de leyes dadas contra ellos por los concilios; ya pecados, sino para aquietar mi conciencia restituyen
hemos dicho que estas leyes no prueban mas que la do lo que no me pertenece.
vigilancia de los obispos y el celo que tenian por el Mosheim conviene en que muchos obispos llega
sosten de la disciplina. Hubo cismas en Roma por el ron á la dignidad de príncipes, porque los reyes y
ntificado ; pero cuál fue la causa? el despotisino de los emperadores fiaban mas en su fidelidad que en la
os emperadores y la ambicion de los grandes, que de sus varones; no se engañaban, y este motivo ha—
quisieron disponer de esta dignidad y sujetar los su— cia honor al clero.
fragios del clero y del pueblo. Mosheim lleva el afer Convenimos que no es en el siglo IX donde han bri
ramiento hasta decir que los monges, aunque viciosos, llado mas las guerras causadas por la division de la
fanáticos, intrigantes, revoltosos y entregados á la di sucesion de Carlo—Magno; las incursiones de los nor
solucion, eran, sin embargo, muy respetados; nosotros mandos y demas bárbaros, la ignorancia del pueblo
sostenemos que si en la mayor parte hubieran sido y de los nobles, la intrusion de estos en los obispa
viciosos, habrian sido despreciados y aborrecidos. dos, el saqueo que hicieron de los bienes eclesiasti
Repite el mismo absurdo cuando echa en cara al cos fueron tantas calamidades para la Iglesia como
clero del siglo VIl la ambicion, una avaricia insacia— para la sociedad civil; el concilio de Trosley, celebra
ble, fraudes piadosos, un orgullo insoportable y un do en 909 atribuye á esta misma causa el desarre
desprecio insolente de los derechos del pueblo. No glo de los monges. Se publicaron leyendas falsas, fal
son los eclesiásticos, sino los guerreros con el nom sos milagros y reliquias; se entregaron á las devo—
-

bre de nobles, los que han oprimido al pueblo, que ciones minuciosas y puramente esteriores, etc.; pero
han considerado como esclavo á cualquiera que no decimos que en todos estos abusos entraron menos
llevaba las armas. La plaga mas grande de la glesia fraudes piadosos que rasgos de ignorancia, y ciega
ha sido la ambicion de estos mismos nobles que usur credulidad. Los que intentaron remediar el mal no
¿ todas las dignidades eclesiásticas; pero lo atri pudieron hacer mas que vanos esfuerzos; la silla de
uiremos al clero que fue la víctima de esto, mas bien Boma se resintió de la desgracia comun lo mismo que
º al carácter brutal y feroz de los bárbaros? Cuan— las demas; á quién se puede cnlpar de esto?
o Mosheim , ha creido ver relajacion en los monges, Es pues injusticia y malignidad el sostener, como
ha declamado contra este desórden; cuando no ha lo hace Mosheim, que los papas que llegaron á ser
visto mas que la soledad, el recogimiento, la auste mónstruos fueron la causa de la ignorancia y de los
ridad, el trabajo, les ha echado en cara una afecta— vicios del clero en el siglo X. El mal venia de mas
cion farisáica de piedad; mas el verdadero carácter atrás, y muchos pontífices hicieron lo que pudieron
farisáico es el calumniar fuera de tiempo. Dice que ara detener sus progresos. Tuvieron alguna parte en
en este siglo los padres tenian el furor de meter á sus degradacion, en la ignorancia, en los VICIOS del
hijos en los claustros; la razon de esto es muy senci clero en el Oriente, en donde no tenían ninguna in
lla: es porque no podian darles en otra parte una edu fluencia ? Todos los escándalos acaecidos en Roma
cacion cristiana. Dice que se retiraron á ellos los mal fueron obra de los tiranos que trastornaban la Italia,
vados con una vana esperanza de alcanzar el per que disponian del pontificado como de su patrimo
don de sus crímenes, ¿hubiera valido mas que los nio, que lo entregaban ex-profeso á hombres vicio
continuasen, ó que fuesen á hacer penitencia de ellos? sos, por temor de que pontífices mas respetables por
Segun él, no se vé en el clero del siglo VII mas que sus costumbres, no tomasen demasiado ascendiente
lujo, glotoneria, incontinencia y gusto por la guerra sobre ellos. Una prueba de que los desórdenes del
por la caza. En efecto, es de presumir que muchos de clero provenian del saqueo de ios bienes eclesiásticos
os que fueron introducidos en los obispados y prela es que los concilios que notaron la infamia del con
cias por la tirania de los grandes llevasen á ellos los cubinato de los clérigos condenaron al mismo tiempo
vicios de su educacion. Pero hay pruebas positivas la simonía, que fue siempre inseparable de él; y esta
que este desórden, demasiado comun en las Galias, no tirania de los seglares la confiesa el mismo Mosheim
 CLE k52 CLE
en el siglo X, 2.° p., c. 2, S. 10. Estos dos vicios la reforma: sabemos quiénes fueron sus autores, por
reinaban principalmente en Alemania, donde la re qué medios se verificó y los maravillosos efectos que
ligion, dice Fleury, habia sido siempre mas debil. produjo; los examinaremos en su lugar. Véase Re
Esto es lo que hizo el clero de aquel pais tan furioso FORMA . .
contra Gregorio VII que queria reformarlo. Costum Los mismos incrédulos, despues de haber copiado
bres de los cristianos, n. 62. todas las sátiras de los protestantes contra el clero,
Estos desórdenes fueron poco mas ó menos los han puesto en ridículo el tono de jactancia de estos
mismos en los siglos XI y XII; pero aun en estos pretendidos reparadores; y muchos escritores, naci
tiempos de confusion y de pillage hubo gran número dos en el protestantismo, convienen en la licencia de
de personages respetables en el clero, tanto regular costumbres que no tardó en introducirse en él, y la
como secular. Es propio de la buena fé el confesar que reina todavia. ¿Dónde está, pues, el gran bien que
que durante el hambre del año 1032, la caridad de resulta de él?
los obispos y de los abades se llevó hasta el heroismo. Mosheim acaba su libelo infamatorio por negar la
Hist. de la Iglesia Galicana, t. 7, l. 20, año 1031. utilidad de los decretos del concilio de Tren lo con
Las contiendas entre el sacerdocio y el imperio, con respecto á la disciplina; segun su parecer, esta refor—
ue los protestantes hacen tanto ruido, provienen ma nada ha producido, sobre todo con respecto á los
e que los emperadores querian tener con Roma no obispos. Aunque esto fuera cierto en cuanto á los obis
solo la potestad civil, sino tambien el derecho de pos de Alemania que son príncipes soberanos, ¿qué
disponer arbitrariamente del pontificado; las desgra ¿ su ejemplo contra los de Francia, España é
cias que habian resultado de esta pretension hicie talia? Otros protestantes han sido mas juiciosos: con
ron conocer á los papas y al clero la necesidad de opo vienen en que si antes del concilio de Trento el clero
nerse á ella. Si la mayor parte de estos pontífices no hubiese sido como lo es en el dia, no hubiera tenido
fueron hombres muy virtuosos, los príncipes contra lugar la pretendida reforma de Lutero y de Calvino.
quienes disputaban lo eran todavia menos; no ve— Algunos incrédulos han llevado mucho mas allá la
mos qué hubieran ganado la religion, las costumbres malignidad: han pretendido probar que el estado ecle
y la civilizacion en que estos déspotas ambiciosos hu siástico, por sí mismo, es esencialmente malo.
bieran conseguido esclavizar á la Iglesia para siem 1.° Dicen que unas facultades como las que el cle
pre. Los pontífices quisieron disponer de todos los ro se atribuye deben necesariamente orgu
beneficios, porque los príncipes seculares los pro— llo á un eclesiástico, hacerle ambicioso, falso, hipó
veian muv mal. crita y profundamente vicioso.
En el siglo XIII se hicieron proyectos y tentati Si este cargo fuera racional, recaeria sobre el mis
vas de reforma, pero con poco éxito. Esto dió origen mo Jesucristo, puesto que él es quien ha dado á los
á las Ordenes de religiosos mendicantes; Mosheim prelados de la Iglesia las facultades de instruir, per
confiesa que por la austeridad de sus costumbres se dornar los pecados, reprender y corregir. El les dijo
grangearon la confianza de los pueblos. Desgraciada en la persona de sus apóstoles : «El que es ministro
mente este remedio no era suficiente para repararlo mio será honrado por mi Padre.» Joan c. 12, y. 26.
todo, y el gran cisma que sobrevino en Occidente en «Mi Padre os ama, porque me habeis amado y ha
el siglo XIV hizo la reforma poco menos que impo— beis creido en mí,» c. 16 y 27. Pero cuidó de repri
sible. Sabemos por otro lado que la peste negra que mir en ellos el orgullo y la ambicion, advirtiéndoles
reinó en el año 138 y las dos siguientes tuvo conse que el que quisiese ser el primero debia ser el último
cuencias terribles, y fue una de las principales causas y criado de todos. Mat. c. 20, y 26. Si el hombre
de la relajacion que se introdujo entre el clero y en los abrazó el estado eclesiástico por interés, por ambi
monasterios. Véase la Historia de la Iglesia Galicana, cion, sin un deseo sincero de cumplir sus deberes,
t. 13, l. 39. Mosheim no se ha dignado decir de esto era ya criminal antes de entrar en él: no es, pues, el
una sola palabra: ¿qué remedio puede oponer la clericato el que lo ha hecho tal. Es un absurdo el de
prudencia humana á semejantes plagas? Fue motivo cir º un estado, en el que todos los deberes son ac
para todos los seclarios el declamar con vehemencia los de virtud, puede hacer á un hombre vicioso. La
contra los vicios y los abusos del clero; pero se deben única ambicion permitida es el ser útil, y mientras
considerar todas estas ¿ , dictadas por una que el clero continúe siéndolo, será honrado á despe
ignorancia furiosa, como grandes pruebas de la cor cho de sus enemigos. -

rupcion general del estado eclesiástico? Continuaron 2." Pretenden que el clero es un cuerpo estraño
durante el siglo XV. Sin embargo, cuando se consi— al Estado, y que se considera como tal; que los inte
dera por un lado la lista de los concilios que se cele reses particulares de este cuerpo sofocan en un ecle
braron durante estos tres siglos y el tenor de sus de siástico todo celo de interés público, y lo hacen mal
cretos, por otro el católogo de los escritores eclesiásti súbdito y mal ciudadano.
cos y el objeto de sus obras, y en tercer lugar, el nú No es facil comprender cómo un cuerpo dedicado
mero de santos cuyas virtudes fueron reconocidas au al servicio del público ó del Estado, que subsiste á
ténticamente, se ve uno precisado á pensar que los cla espensas de este, que debe dar ejemplo de sumisioná
mores de los valdenses, de los albigenses, de los lolar las leyes civiles y al gobierno, puede creerse estraño
dos, de los wiclefitas, de los husitas y otros fanáticos al Estado. Se podria con tanta razon, ó mejor con tan
semejantes no merecen mucha atencion, y que los to absurdo, hacer el mismo cargo al estado militar, al
protestantes yerran muchísimo en dárnoslos como un de la magistratura, al de la nobleza, que todos tienen
título auténtico de la mision de los reformadores. privilegios é intereses particulares. -

Por último, apareció en el siglo XVI la gran luz de Se ha repetido con frecuencia que el clero no se
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convino con los soberanos mas que para sus propios cos sin revocar tambien los que de la misma natura
intereses; esto es una falsedad. En las asambleas de leza han sido dados á la nobleza, á los empleos de
la nacion no ha dejado nunca el clero de llevar á los la magistratura y otros títulos.
ies del trono las representaciones, las necesidades, * En Francia las leyes de la revolucion abolieron
as justas demandas de la clase media. En los princi los antiguos privilegios de la nobleza y del clero.
pios de la monarquía los obispos estuvieron casi siem Bueno es recordar que el nombre de clérigo, dado
pre adornados del título de defensores, encargados de en los siglos medios á cualquier letrado, y de clerecia,
sostener los derechos, los privilegios, los intereses de que designaba toda clase de ciencia, son un testimo
las villas y de los comunes; y nunca estuvo desempe nio irrecusable de los servicios que los eclesiásticos
ñado este cargo mejor que por ellos: todavia en la ac han hecho á la Europa entera despues de la inunda
tualidad no hay ningun cura de las aldeas que no ha cion de los bárbaros; si la religion no les hubiese
ga el mismo servicio á sus feligreses. obligado á estudiar, se hubieran perdido todos los
3.° Muchos han osado escribir que el clero está conocimientos. Pero despues que los filósofos se han
siempre pronto á resistirá las órdenes del gobierno y querido apoderar de la llave de la ciencia, ser los
á rebelarse; otros, pretenden que el clero es el mas únicos doctores del universo, han declarado guerra
ardiente promovedor del despotismo de los soberanos, al clero por envidia de la profesion:
y que siempre les ha dado armas para oprimir á los o SS" La revolucion española ha sabido ensayar
pueblos. el sistema de la francesa en orden á los privilegios,
Dos acusaciones contradictorias no merecen ser re inmunidades y consideraciones debidas al clero. Ape
futadas. Sin rebelarse, cualquier cristiano se creeria nas pueden deslindarse al presente las facultades que
obligado á resistir á las órdenes que fuesen contra se han abrogado contra las personas y cosas eclesiás
rias á la ley de Dios, y morir antes que faltará su con ticas los altos poderes, y sus respectivas dependen
ciencia. Escepto este caso, sabe tambien como el cle cias. Los señores obispos, los cabildos, párrocos y to
ro, que Dios manda el estar sometidos á las potestades do el clero gimen bajo la tutela, no solo de la admi
superiores, etc. Rom. c. 13, y. 1. Despues que á los nistracion pública, sino que estan sujetos al capricho,
filósofos les ha parecido bien conmover el pueblo con humor y desenfado de las autoridades locales. No se
tra el gobierno, enseñar máximas sediciosas, inspirar trata ya de las injusticias, despojos, persecuciones y
el espíritu de rebelion, el clero se cree obligado á pre vituperios que el clero ha recibido por espacio de tan
dicar la obediencia con mas cuidado que nunca. tos años; y se piensa menos todavía en indemniza
. Por un lado los incrédulos han presentado á los an ciones, y justa reparacion de las varias pérdidas que
tiguos profetas como rebeldes y sediciosos, porque ha sufrido, sino que por señal de respeto y venera
echaban en cara á los reyes sus desórdenes: se ha vi cion que se tiene al clero, se le exige se muestre con
tuperado á S. Juan Crisóstomo la censura que hizo de tento y satisfecho hasta el punto de ser apologista de
los vicios que reinaban en la corte de los emperado los causantes, ó continuadores de la fatal obra de la
res, y por la que se atrajo el odio de los cortesanos: revolucion. Solo asi se concibe que ante la censura de
en la actualidad se quejan de que el clero no se opone los publicistas modernos haya merecido el clero espa
al despolismo de los príncipes. Se dice que hay una ñol (por mil títulos digno de respeto y compasion) la
conspiracion entre los eclesiásticos y los soberanos nota de ingrato, que con escandaloso sarcasmo se le
para oprimir á los pueblos. Al menos no es el cle ha aplicado. Indica esto que la revolucion es genero
ro el que fomenta, el despotismo de los príncipes sa, urbana, magnánima y hasta piadosa. Con razon,
mahometanos ó idólatras de Siam, de la Cochinchi pues, se constituye juez de las propiedades, prescrip
na; del Pégu, de la China, del Japon, de las Indias, ciones, privilegios, inmunidades y derechos del clero.
y del interior del Africa; hay mucha diferencia entre Seria triste en verdad tener que defender estos sagra
su gobierno y el de los monarcas cristianos. Desde dos objetos ante el injusto, incompetente y despiada
que los protestantes han despojado á los ministros de do tribunal de una revolucion mil veces condenada
la religion de toda autoridad, ¿vemos á los sobera por sus mismos hijos y apologistas; pero si fuera per
nos de Alemania tratar á sus súbditos con mas dulzu mitido un solo cargo contra una y otros, les encar—
ra que en el reinado del catolicismo? Aniquilando el taríamos responderse ásí mismos, cuando mandan, de
clero es como los malos príncipes han llegado al des as inculpaciones que hicieron á sus triunfantes ad
polismo. versarios.
Vemos en el Diccionario de Jurisprudencia los pri
vilegios, las inmunidades, los diferentes grados de Clérigos regulares. Se llaman asi los ecle
autoridad y de jurisdicion de que goza el clero, y que siásticos que se reunen por votos en congregacion y
escilan la bilis de nuestros filosofos reformadores; es se sujetan á una regla comun, para desempeñar las
necesario, dicen, suprimirlos por el bien del público. funciones del sagrado ministerio, para instruir á los
Pero, como perfectamente observa un escritor de pueblos, asistir á los enfermos, hacer misiones, etc.
nuestros dias, no hay ningun abuso, ninguna ley Se distinguen de los canónigos regulares en que estos
injusta, ¿ género de opresion, ninguna especie estan sujetos á los ayunos y abstinencias, á las vigi
de iniquidad pública, empezando por el despotismo, lias de la noche y al silencio de los monges; en lugar
hasta la anarquía, que no haya tenido por pretestó de que los clérigos regulares no se han impuesto nin
el bien general, el interés de los hombres, la felici guna austeridad, sino únicamente la exactitud en des
dad de las sociedades. No hay otro bien público que empeñar todos los deberes eclesiásticos. Con razon
la observancia de la ley natural. Asi, segun esta ley, han pensado, y lo han probado con su ejemplo, que
no se podria tocar á los privilegios de los eclesiásti la vida comun, la sujecion á una regla, el separarse
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CLI 43%) CLI

de los seglares, los mútuos y buenos ejemplos sostie— caer en la barbarie, y parece que estan condenadas á
nen la virtud, escitan el fervor y preservan á un ecle permanecer siempre en ella, á menos que no vuelvan
siástico de los escollos de la piedad. á la luz del Evangelio, de la que les ha privado el al
En Italia se conocen ocho congregaciones de clérigos
coran. Un viagero, que recientemente ha dado vuelta
regulares: los de S. Pablo, llamados barnabitas, los al mundo, asegura que ha visto producir al cristia
de S. Cayetanoó teatinos, los jesuitas; que ya no ec nismo los mismos efectos en todos los climas y en to
sisten, los de S. Maieul; llamados somascos, los de las
das las partes donde los misioneros han llegado á es—
escuelas pias, los de la Madre de Dios, los clérigos re tablecerlo.
gulares menores, y los ministrosó asistentes de los en No debemos, pues, fiarnos en lo que ha dicho el au
fermos. Estos últimos fueron instituidos en Italia por tor del Espíritu de las Leyes, que es casi imposible que
un sacerdote llamado Camilo de Lelis, para cuidar los el cristianismo se establezca nunca en la China. Segun
hospitales, y aliviar á los enfermos. Sisto V, Grego él, los votos de virginidad, la reunion de las mugeres
rio XV y Clemente VII han aprobado este instituto en las iglesias, su comunicacion necesaria con los mi
digno de los elogios de todos los hombres de bien; su nistros de la religion, su participacion á los sacra
fundador murió santamente en 161. Sus miembros mentos, la confesion auricular, la estrema-uncion, el
hacen los mismos servicios que los hermanos de la ca matrimonio con una sola muger son obstáculos inven
ridad. Se les llama tambien cruciferados porque lle cibles; porque todo esto trastorna las costumbres y
van una cruz roja en su sotana. los usos del pais, y choca al mismo tiempo con la re
ligion y las leyes.
Clima. Se ha disputado en nuestros dias si la re Pero los votos de virginidad y el matrimonio de un
ligion cristiana era á propósito para todos los climas: hombre con una sola muger serán mas dificiles de es
por consecuencia si Jesucristo ha tenido razon en de tablecer en la China que en la Persia, en la Arabia,
cir á sus apóstoles: id, enseñad á todas las naciones. en la Etiopia, en el Egipto y en las costas del Africa,
Sin entrar en una especulacion física ni política, nos en donde el clima es mucho mas ardiente que en la
arece decidida la cuestion con un hecho incontesta China, donde la religion, las costumbres y las leyes
le; y es que el cristianismo ha producido los mismos no eran meiores cuando fue llevado el cristianismo?
efectos, el mismo cambio en las costumbres de todos Quién impediria por otro lado que en las iglesias estu
los pueblos en que se ha establecido. La molicie de viesen las mugeres separadas de los hombres por bar
los asiáticos, la ferocidad de los africanos, la incli reras impenetrables, que se les administrasen los sa
nacion vagabunda de los partos y de los árabes, la ru cramentos con las mismas precauciones que á las re
deza de los habitantes del Norte y de los salvajes se ligiosas? Cuando el Egipto, la Libia, la Mauritania,
han visto obligados á cederá la moral del Evangelio. eran cristianas, las mugeres no estaban encerradas,
Podemos convencernos de esto por el cuadro de las los dos sexos vivian poco mas ó menos con la misma
coslumbres que han reinado en el cristianismo duran libertad que entre nosotros: los PP. de la Iglesia no
te cuatro sigios en las costas de Africa, en Egipto, en han considerado esta sociedad libre como un origen
la Arabia, que reinan todavia entre los abisinios, por de mútua depravacion. Subsiste todavia entre los cris
la revolucion que ha obrado entre los persas en el si tianos de la Etiopia; no han visto los viageros que las
glo VI en Inglaterra, en el IX en los pueblos del Nor mugeres estan alli mas corrompidas que en otras par
te, en nuestros dias entre los americanos y en las es tes. Sosteniendo Tertuliano que las vírgenes de
tremidades del Asia. ben cubrirse luego que llegan á la edad de la pu
Sin duda que hay climas bajo los cuales las costum bertad, supone que las mugeres no llevaban velo, no
bres estan ordinariamente mas corrompidas, y los habla de ninguna especie de clausura para ellas. L. de
habitantes menos apropósito para instruirse; no ha virgin. velandis. En el dia en la China y en todas las
habido dificultades que el cristianismo no haya ven partes donde el mahometismo ha llevado la corrup
cido otras veces; puede, pues, todavia vencerlas en la cion, los velos, los serrallos, los candados y los eunu
actualidad. En el siglo Il pensaba Celso como nues cos no bastan para calmar la celosa inquietud de los
tros políticos modernos, que el designio de colocar á maridos.
todos los pueblos bajo la misma ley, era un proyecto Un chino no comprenderá nunca, dicen, cómo una
insensato; esta profunda especulacion se ha hallado muger puede hablar decentemente al oido de un con
que es falsa y lo será siempre; el cristianismo ha sido fesor: no comprende mejor cómo un hombre puede
destinado por Dios para ser la religion de todas las hallarse solo con una muger en un lugar separado,
naciones como debe ser la de todos los siglos. sin verse tentado á violarla; ambas cosas compren
Una prueba demostrativa de que la religion tiene dería si fuese cristiano. Desterrando la poligamia y
mucha mas influencia en las costumbres de los pue enseñando á los hombres el mérito de la castidad, el
blos que el clima, es que en todas las partes donde se cristianismo quitaria las dos fuentes principales de la
ha destruido el cristianismo, la barbarie y la igno corrupcion. Contra hechos positivos é incontestables
rancia han ocupado su lugar, sin ¿ el transcurso del nada prueban las teorias ni las conjeturas filosóficas.
tiempo haya podido disiparlos. ¿Hay alguna semejan:
za entre las costumbres que reinan en la actualidad Clínicos. Se daba antiguamente este nombre á
bajo el mahomelismo, en la Grecia, el Asia menor, aquellos que habian sido bautizados en su cama du
la Persia, la Siria, el Egipto, en las costas del Africa, rante una enfermedad; se deriva del griego KLyue,
y las que habia introducido allí el cristianismo? En po. lecho.
cos años nuestra religion habia civilizado á todas estas En los primeros siglos de la Iglesia, diferian muchos
naciones; hace cerca de 1200 años que han vuelto á su bautismo hasta el artículo de la muerte, algunas
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 * ULU 35) "COA
veces por humildad, muchas por liberlinage y por pe dad, no dejaban de ser severas é incómodas. El mis
car con mas libertad. Con razon se tenian á estos cris mo prueba que estas prácticas no eran inútiles, puesto
tianos como débiles en la fé y en la virtud. Los PP. de que dice que esta regla de disciplina llenó de glo—
la Iglesia se levantaron contra este abuso; el concilio ria á S. Odon; que fue adoptada por todos los con
ventos de Europa; que por este medio la Orden de
de Neocesarea, can. 12, declara á los clínicos irregula
res para las órdenes sagradas , á menos que por otro Cluni llegó al grado de eminencia y de autoridad,
lado no sean de un mérito distinguido y no se hallen de opulencia y dignidad de que gozó durante aquel
otros ministros; se temia que algun motivo sospecho siglo y el siguiente.
so no les hubiese obligado á recibir el bautismo. El Otra prueba, que el mismo Mosheim dá de su uti
papa S. Cornelio, en una carta referida por Eusebio, lidad, es que en el siglo XII los monges de Cluni se
dice que el pueblo se opuso á la ordenacion de Nova relajaron, porque olvidaron lo que les habia sido
ciano, porque se habia bautizado en su cama estando prescrito por S. Odon. S. Bernardo restableció estas
enfermo. Los clínicos se llamaban tambien gravatarios mismas prácticas entre los religiosos de su Orden, y
por la misma razon, S.Cipriano, epist. 76, ad Mag lo hizo con el misino fruto. Cuando los clunistas qui
num, sostiene no obslante, que los que son asi bau sieron reprender las observancias demasiado rigo
tizados no reciben menos gracias que los demas, con rosas del Cister, S., Bernardo hizo su apologia, y les
tal que lleven las mismas disposiciones. Pero no se les echó en cara su relajacion. Pero el venerable, abad
elevaba á las órdenes sagradas, luego que se sospe á la sazon de Cluni, emprendió por su parte el jus
chaba que habia habido negligencia por su parte. Pa tificar á sus religiosos, y escribío á S. Bernardo con
rece que solo en la enfermedad era cuando se permi mucha moderacion; pero conoció tambien la injus—
tió bautizar por aspersion. Bingham, l. 11, c. 11, l. , ticia de los clunistas, puesto que él mismo hizo re—
p. 333. glas para aprocsimarlos á las del Cister Fleuri, His—
toria ecles, lib. 67. S. 8; lib. 68, S.81.
Clum1. Célebre abadía situada en Borgoña en el Mosheim es todavia en esto un impostor, cuando
Maconesado; es la cabeza de una congregacion de be representa esta disputa como una especie de guerra
nedictinos, que lleva su nombre. escandalosa que tuvo funestas consecuencias, y que
Esta abadia se fundó bajo la regla de san Beni causó trastornos en muchas partes de Europa; solo
to en el año 910, por Bernon, abad de Gigny, con fue una simple guerra de pluma, y nada hubo mas
la proteccion y con las dádivas de Guillermo I, du moderado que los escritos de ambas partes. Mosheim,
que de Aquitania y conde de Auvernia. Algunos au Hist. ecles. del siglo X, 2.° parte, c. 2, S. 11; del
tores ¿ han querido hacer subir su funda— siglo XII, 2." parte, c. 2, S. 17.
cion al año 826; pero su opinion está desnuda de
pruebas sólidas. Coaccion. Violencia hecha á la voluntad, y que
En su ereccion esta abadia fue puesta bajo la pro— la quita la libertad de obrar y de resistir; en conse—
teccion inmediata de la santa Sede, con prohibicion cuencia cuando la coaccion tiene lugar, , ya no hay
espresa á todos los seglares y eclesiásticos de inco mérito ni desmérito, crimen ni virtud en la accion del
modar á los monges en sus privilegios, y sobre todo, que ha forzado. Entre la necesidad y la coaccion,
en la eleccion de su abad. Quisieron por esta razon hay la diferencia de que la primera proviene de un
eximirse de la jurisdicion del obispo, lo que dió lu principio interioral que obra, y la segunda de un prin
gar á otros abades á hacer la misma pretension. Esta cipio esterior. Un hombre que ha ayunado durante mu
disputa se ha sentenciado hace algunos años en favor cho tiempo esperimenta por necesidad el hambre ó el
de obispo de Macon. deseo de comer; aquel á quien se meten por violen
La congregacion de Cluni es considerada como la cia alimentos en la boca, sufre coaccion de comer.
mas antigua de todas las que se han reunido en Fran Ambas privan al hombre de poder elegir, por consi—
cia bajo un solo gefe, que no componen mas que un guiente de la libertad; aunque un insensato ó un fre
cuerpo de muchos monasterios unidos bajo la mis nético no sean impulsados por un principio esterior,
ma regla. Ha dado á la Iglesia muchos personages sino por la disposicion interior de sus órganos á eje—
* recomendables por su saber y por sus virtudes. cutar ciertas acciones; haciéndolas, no son conside—
Dom Martin Marier ha hecho imprimir en Paris, rados con mas libertad que si hubiesen sido condu—
en 161, la Biblioteca de los escritores de esta con — cidos é impulsados contra su voluntad por un hombre
gregacion, en un vol. en folio. Esta abadia fue sa mas fuerte que ellos.
queada, y quemada la biblioteca por los calvinistas Cuando enseñó Jansenio que para merecer ó des—
en 1562. merecer,ºen el estado de naturaleza caida, no es
Mosheim ha observado que se habla impropiamen necesario hallarse libre de necesidad, sino solameute
te cuando se dice la Orden de Cluni, puesto que es de coaccion, es decir, de no sufrir violencia por
la abadia y sus dependencias no son una Orden di parte de alguno, se ha opuesto tanto á la sana téo—
ferente de la de los demas benedictinos; se debe decir logia como al buen sentido, y ha hecho una injuria
la congregacion de Cluni, como la congregacion de san atroz á S. Agustin artibuyéndole esta doctrina ah
Mauro, de S. Vannes, etc. Pero este autor no hace surda. V. LmBERTAD.
una reflexion muy juiciosa, cuando dice que S. Odon
sucesor del abad Bermon, primer fundador, obligó no Coactivo. Revestido del poder de obligar ó de
solo á los monges á observar su regla, sino que aña hacerse obedecer por la fuerza. Las leyes del sobe
dió á ella una multitud de ritos y ceremonias, que rano tienen por sí mismas fuerza, coactiva, porque
aunque inútiles á pesar de su apariencia de santi puede imponer penas aflictivas á los que las violán.
º,
 -

COCº 436 COR

Las leyes de la Iglesia no tienen por sí mismas mas Cofrade. Nombre que se da á las personas con
ue la fuerza directiva; puesto que la Iglesia no pue las que se forma una sociedad ¿ por causa
¿ imponer mas que penas espirituales; sus leyes de religion. En el principio del cristianismo se lla
no tienen fuerza coactiva, sino cuando han sido au maban los fieles los hermanos; una asociacion nueva
torizadas por el soberano, y han llegado á ser leyes formada para practicar las mismas buenas obras de
del Estado. Por eso no obligan menos á los fieles bajo iedad ó de caridad estableció entre ellos una nueva
pena de pecado, puesto que segun la sentencia del raternidad.
mismo Jesucristo, el que no oye á la Iglesia debe ser
tenido como pagano y publicano. Mat. c. 18, y. 17.
Cofrada. Sociedad de muchas personas piado
sas, establecida en algunas iglesias para honrar par—
Coeeyanos. Secuaces de Juan Cox ó Coceyo, ticularmente un misterio ó á un santo, y para prac
que nació en Brema en 1603, profesor de teologia ticar los mismos ejercicios de piedad y de caridad.
en Leyden, y que hizo mucho eco en Holanda. Preo Hay cofradias del Smo. Sacramento, de la Santísima
cupado del figurismo mas escesivo, consideraba toda Vírgen, de la Cruz ó de la Pasion, de los Agonizan
la historia del antiguo Testamento como el cuadro de tes, etc. Muchas se han establecido por bulas de los
la de Jesucristo y de la Iglesia cristiana; decia que to pontífices que les conceden indulgencias; todas tienen
das las profecias eran relativas directa y literalmente por objeto escitar á los fieles á las buenas obras, y
áJesucristo, que todos los acontecimientos, que deben cimentar entre ellos la paz y la fraternidad.
suceder en la Iglesia hasta el fin de los siglos, se ha Como las buenas obras constituyen la gloria del
llan figurados y designados con mas ó menos cla cristiano y forman su mejor apología, los incrédulos
ridad en la historia santa y en los profetas. Se ha de nuestro siglo no han omitido nada para hacer sos
dicho de él que hallaba á Jesucristo en todas las par pechosas y odiosas todas las cofradias ó asociaciones
tes del antiguo Testamento, en lugar que Grocio no que tienden á multiplicarlas.
le veia en ninguna. -

Segun su opinion, antes del fin del mundo debe SX& , COFRADIA (Derecho canónico). Es una es
haber en la tierra un reinado de Jesucristo que des pecie de sociedad formada por varias personas, con
truirá el del antecristo, y en el que los judios y todas el objeto de alguna devocion particular.
las naciones se convertirán. Referia todas las Escri Las cofradias que fueron desconocidas en los me
turas á estos dos pretendidos reinos, y hacia de ellos jores siglos de la religion interesan igualmente al Es—
un cuadro de imaginacion. Tuvo muchos sectarios, tado y á la Iglesia. Consideradas como una reunion
y se dice que hay todavia un gran número de ellos de individuos que forman cuerpo y tienen bienes
en Holanda. Voei y Desmarets escribieron contra él temporales, estan sujetas á la autoridad civil; y
con mucho ardor, pero no vemos en qué pecaba con como reunion de fieles cristianos que tienen por
tra los principios de la reforma. Desde que cualquier objeto algunos ejercicios espirituales, deben estarlo
individuo tiene el derecho de creer y profesar todo á la jurisdicion eclesiástica. No hay dificultad en
lo que vé ó cree ver en la Escritura, el mayor vi este pais acerca de los referidos principios generales,
sionario no yerra mas que el teólogo mas sabio, nadie y nunca ha pretendido, la potestad espiritual ni la
tiene el derecho de censurar su doctrina. V. Co temporal tener el derecho esclusivo de fundar cofra
MENTARIO. dias, aunque todos convienen en que es necesario á
un mismo tiempo el permiso por escrito del obispo
. Co- eternidad. Término usado entre los teó diocesano y la autorizacion real, para que tengan
logos para espresar que las tres personas divinas son una existencia legal estas asociaciones. La aproba
igualmente eternas. Los socinianos, lo mismo que cion ó permiso de los obispos es de absoluta necesi
los arrianos, no quieren reconocer que el Hijo de Dios dad, y asi se dispuso en el art. 10 del reglamento
sea co-eterno al Padre; mas la Iglesia lo ha decidido de los regulares que hizo el clero de Francia, sin
diciendo que le es consustancial; y asi es como en— que se haya introducido ningun derecho nuevo sobre
tiende las palabras de S. Juan. «En el principio el este particular, pues los concilios provinciales, tan
Verbo estaba en Dios, y era Dios». to antiguos como modernos de Francia é Italia así
Para torcer este sentido, los socinianos suponen lo tienen mandado, como puede verse en los decre
que el alma de Jesucristo ha sido criada antes que tos de los concilios de Reims en 156%, de Rouen
todos los demas seres, y que Dios, le dió el poder de en 1571, de Tours en 1573, de Aix en 1573 y de
sacarlos de la nada. Segun esta hipótesis, ¿cómo ha Narbona en 1609; nuestros reyes han sostenido este
odido decir Dios: «Yo soy solo el que hasestendido derecho de los obispos, como procedente de su ca
os cielos y asegurado la tierra, nadie habia conmi rácter de principales pastores.
go»? Isai. c., '', y. 24; Job. c. 9, y. 8. Segun los Habiendo querido el cabildo de la iglesia colegiata
socinianos el alma de Jesucristo, que es una perso de Vezelay trasladará su iglesia de santa Maria Mag
na, estaba con Dios. -
dalena una cofradia del Santísimo Sacramento, que
estaba fundada en la parroquia de san Pedro, apeló el
Co-igualdad. Perfecta igualdad entre perso— cura como de abuso, y el obispo de Autun declaró
nas de la misma naturaleza. La Iglesia ha decidido nula la traslacion, y fue confirmada la providencia
contra los arrianos que en la Sma. Trinidad el Hijo y por el consejo de Estado en 25 de enero de 1673.
el Espíritu Santo son dos personas co—iguales al Pa Si la fundacion de las cofradias tiene que ser con
dre. Si entre ellas hubiese desigualdad, no se podria sentida y aprobada por los obispos, es claro que de
artribuir la divinidad á la que fuese inferior á la otra ben estar sujetas á su jurisdicion en todo lo que cor
 COF 437 COF
responde á lo espiritual, y á la celebracion y órden cofrades, ni hiciesen demandas; por otra sentencia
del servicio divino; y siempre que los jueces secula que dió el 6 de febrero de 1737 á peticion del mismo
res han querido conocer de estos asuntos, han sido magistrado, suprimió la cofradia de nuestra señora
reprimidos en su empresa por el Consejo de Estado. del Buen-Parto, fundada en la iglesia de S. Esteban
En una de sus providencias de setiembre de 1659 le des Gres en Paris.
prohibió al teniente Senescal de Tarbes que intervi— Las cofradias que no hayan solicitado el real per
niese y tomase conocimiento en el órden de los oficios miso conformativo de su fundacion desde el año de
divinos, de las procesiones, del lugar que debian ocu 1749 se hallan en el caso de ser suprimidas. A lo
par las cofradias, de los que iban alumbrando, y los menos están suspendidas en el distrito del parlamento
demas que asistian á ellas, mandando que se ejecuta de París si no se conforman con lo dispuesto por todas
sen las disposiciones que habia dado al efecto él obis las cámaras reunidas el viernes 9 de mayo de 1760,
diocesano; y en otra del 9 de agosto de 166% hizo en cuyo año se verificó la espulsion de los jesuitas, y
as mismas prevenciones al teniente general de Alen las muchas cofradias ó congregaciones dirigidas por
zon y á los demas jueces seculares. Suscitáronse gran ellos, de las que se dijo tanto bueno y tanto malo 1,
des disputas en la diócesis de Tarbes sobre las pre llamaron la atencion del Consejo, y este tomó sus
tensiones que tenian los priores de diferentes cofradias precauciones para contener los abusos que habia en
de colocarse en las procesiones entre el clero secular ellas y precaver los que podian originarse; de consi
y regular, que se compusieron por medio del obispo; guiente mandó: «que ninguna clase de persona ó
apelaron algunos particulares, reclamando el abuso, personas formase reunionesó cofradias, congregacio
al parlamento de Tolosa, el cual se lo prohibió. La nes ó asociaciones en la ciudad de Paris, ó en otra
asamblea del clero de 1680 suplicó al Consejo, y este parte sin ¿? espreso del rey, y con sus despa
mandó que se llevasen á efecto las disposiciones to chos visados por el Consejo; que en el término de seis
madas por el obispo. Cuando han cedido á los obispos meses los presidentes, administradores y contadores
nuestras leyes la autoridad que dimana de su carác— de todas las cofradias, asociaciones y congregaciones
ter y de sus funciones sobre las cofradias, han vigi ecsitentes en el distrito del Consejo remitiesen al pro
lado tambien sobre su fundacion y la administracion curador general del rey, ó á los sustitutos en las pro
de las rentas. En el cap. 25 se ha conservado una vincias, una copia en debida forma rubricada por
prueba de las libertades de la Iglesia galicana 1 de los ellos de los despachos reales de fundacion y cuales
despachos que el rey Felipe el largo concedió en 1319 quiera otro título que pudiesen tener de sus reglas,
á la cofradía de nuestra señora de Boulogne. estatutos y fórmulas de promesas ú obligacion formal,
El artículo primero del edicto de 1749 pone á las junto con una memoria que espusiese e tiempo y for
cofradías en el número de los establecimientos ó fun ma de su ecsistencia, cómo tambien un ejemplar de
daciones que necesitan la real autorizacion registra los libros compuestos para uso de las referidas cofra
da en los parlamentos ó consejos superiores. Las co dias, asociaciones y congregaciones.
fradias se hallan tambien comprendidas en el artí— «Igualmente añadió que los sustitutos del procura
culo 13 del mismo edicto, el cual declara nulas las dor general del rey remitiesen á él los despachos, es
fundaciones que se hayan hecho despues del real de tados, memorias, ¿ de promesas, obligaciones
creto de 1666 ó en los treinta años anteriores, sin ser verbales y demas documentos que recibiesen, para
autorizados por reales decretos registrados en debi que dando cuenta de todos ellos ál Consejo, resolviese
éste con todas las cámaras reunidas lo conveniente.
da forma, «reservándonos sin embargo, continúa
el legislador, con respecto á los referidos estableci «En el caso de que los presidentes, administrado
mientos que están en pacífica posesion, y sin ningu res y contadores de las cofradias no se conformasen
na manda de nulidad formada antes de la publica con estas disposiciones, no se les permilirá reunir de
cion del presente edicto, el que nos den cuenta, no modo alguno ni continuar en los ejercicios de sus co
solo de su objeto sino tambien de la naturaleza y nú fradías, asociaciones ó congregaciones, y á cualquie
mero de bienes que poseen para proveer segun con ra persona de cualquier estado y condicion que sea,
venga, bien sea concediéndoles nuestros reales des se le prohibe asistirá ellas bajo las penas prescritas, y
pachos, si nos parece conveniente, ó bien sea agre desde ahora para en adelante se prohibe bajo las mis
gando los referidos bienes á los hospitales ú otros es mas penas reunirse con pretesto de cofradia ú otra
tablecimientos ya autorizados, ó mandando que se asociacion cualquiera en ninguna capilla interior y
vendan y se aplique su producto segun está prevenido oratorio particular de las casas religiosas ú otra cual
en el artículo precedente.» quiera, y aun en las iglesias que no estén abiertas á
El parlamento de París habia suprimido antes de toda clase de gentes.»
este edicto algunas cofradias fundadas sin real autori Despues que se estinguieron en Francia y en otros
zacion aunque eran muy antiguas. estados católicos los jesuitas, las cofradias que eslaban
La supresion de las de nuestra señora de S, Sebas á su cargo sufrieron la misma suerte; pero en cuanto
tian y de S. Roque que habia en Paris en el hospicio á las otras que pertenecian á olras comunidades reli
de los trescientos, que tenian mas de trescientos años giosas ó á las parroquias, no tuvo efecto ninguno esta
de antigüedad, se decretó en la sala primera á peli disposicion, sin duda porque el Consejo no encontró
cion ¿á general Joli de Fleuriel5 de enero de cosa que mereciese suprimirlas ó reformarlas, segun
1732, prohibiendo á las partes que se reuniesen como los documentos que presentaron. Los bienes y rentas
1 º S" En aquel tiempo verdaderamente famoso por el
1 o Sº La Iglesia galicana llorará siempre sus pertene furor que se desplegó contra la compañia de Jesus, quedaron co—
cidas libertades, designadas y conocidas ya generalmente con el mo establecidas por los regalistas mil máximas bien poco funda -
nombre de verdaderas esclavitudes. das en el derecho, y bien distantes del espiritu de piedad.
TOM0 l.
 CO 38 COL
de las cofradias han estado siempre sujetos á la juris No nos resta mas que poner á la vista de nuestros
dicion secular en cuanto al modo de emplearlas. El lectores algunas disposiciones eclesiásticas y civiles
art. 10 de la ordenanza de Orleans previene que des— concernientes á las cofradias.
pnes de deducidas y satisfechas las cargas del servicio El concilio de Sens, celebrado en 1528, manda
divino, se aplique el resto de sus rentas para dotar que no se le exija ni preste juramento al que entre
escuelas, y dar limosnas en los pueblos y aldeas inme en las cofradas. El de Bourges, del año 158, no per
diatas al lugar donde se hallan establecidas, sin que mite que las cofradias celebren sus oficios in choro ad
se puedan aplicar á otros usos por ningun motivo. majus altare ecclesiarum cathedralium aut collegiata
l artículo 37 de la ordenanza de Blois está con— rum, sed insacellis tantum et cartra horam qua diri
cebido en los términos siguientes: «segun los estatutos num oficium peragitur.
antiguos hemos prohibido cualesquiera cofradías de El de Narbona de 1609 dice que no tengan el San
gentes de oficio y artesanos que se reunan en banque tísimo Sacramento en las capillas de las cofradias:
tes, mandando que sus rentas se empleen en la cele misi hoc espresse approbante episcopo. El art. 7." de la
bracion de los oficios divinos, en el sustento de los ordenanza de Rousillon prohibe que se tengan han
pobres artesanos y en otras obras de caridad.» Ob— quetes y comidas en las cofradias, cuya disposicion
serva Boutaric que no se puede comprender facilmen es la misma del art. 7 de la ordenanza de Moulins,
te este artículo, pues por una parte parece que quiere donde se añade: «sin que permitan nuestros jueces
abolir enteramente todas las cofradias de artesanos y la conmutacion de los banquetes en dinero ú otra cosa
gentes de oficio, conformándose en esto con el regla equivalente que pretendan exigir á los que hayan
mento de 1539, art. 185 y sig; y por otra trata solo de ser admitidos».
de reformar los abusos introducidos en las cofradias, Por otra disposicion que dió en forma de reglamen—
porque se reunian para tener banquetes, conformán to el parlamento de Paris en 7 de setiembre de 1689
dose en esto con la ordenanza de Orleans, artículo 1.º, en un negocio de la cofradia de S. Luis, establecida
pero aunque se le dé cualquiera interprelacion, las en Orleans en la iglesia de S. Donaciano, se mandó
cofradias subsisten todavia con los mismos abusos. entre otras cosas que los cofrades no pagasen derecho
Las observaciones de Boularic son esactas, y las or alguno y que la aceptacion ó dimision de los oficios ó
denanzas y disposiciones de los reglamentos acerca de cargos fuese absolutamente libre, lo cual se confir
la administracíon de las rentas de las cofradias no mó tambien el 11 de enero de 1696 por el mismo Con
han tenido efecto. sejo, anulando la sentencia que condenaba á Dioni
Cualquiera cofradia que no tenga su real permiso sio Richard á que cumpliese las funciones de mayor
competente no representa en el Estado un cuerpo ci domo de fabrica de la cofradia de los jóvenes longistas
vil y legal, y por consiguiente no es capaz de dona de Paris habiendo sido nombrado por sus compañe
cion, de institucion, ni de legado. Ricardo en el Tra ros. En las provincias meridonales hay unas cofra
tado de las donaciones, l. 1, p. 135, refiere varias dias célebres conocidas con el nombre de penitentes,
sentencias que han declarado nulas las instituciones que forman unascorporaciones considerables. Mr. Du
ó legados hechos á las cofradias que no estén autori rand de Mallane, abogado en el parlamento de Aix,
zadas con los respectivos despachos, y despues del afirma que tienen costumbre de llevar las causas so
edicto de 179 se hallan en el mismo caso que todas bre la recepcion y eleccion de los cofrades ante los
las comunidades religiosas ó mistas. jueces seculares; y añade que, no obstante la orde
Un edicto del mes de febrero de 170%, al que si nanza de Moulins, la jurisprudencia de los parla.-
guió despues la sentencia del Consejo de 2% de marzo mentos en los distritos á donde pertenecen los pre
siguiente, que manda se ejecute, ha creado y eri— tendientes los obliga á aceptar alternativamente las
gido en lítulo de oficio formal y hereditario el de cargas y oficios de las cofradias, y á pagar un derecho
tesorero recibidor y pagador de las rentas de las fá anual, aunque módico, dado solamente á título de
bricas y cofradias eni cada
de la ciudad de
una de las parroquias limosna para mantener la fábrica y culto de la capilla.
otras del reino, el cual será Las cofradias autorizadas en debida forma se con—
mayordomo perpetuo de la fábrica y tendrá su asien sideran en Francia como si fueran corporaciones re
to inmediato á los mayordomos honorarios en las par ligiosas y eclesiásticas, y por lo mismo estan sujetas
roquias donde los hay y el primer sitio donde no á pagar los diezmos y otras imposiciones que paga el
los haya. Otro edicto del mes de setiembre del mis— clero, sin que puedan vender ni enagenar válidamen
mo año suprimió estos oficios en la ciudad y arraba— te sus bienes inmuebles á no ser con las formalidades
les de Paris, mandando que las cosas volviesen al prescritas para la enagenacion de los bienes ecle—
estado anterior. Por último, el decreto del Consejo de siásticos. (Artículo del abate Bertolio, estractado del
24 de enero de 1705 previene que los oficios de teso Diccionario de jurisprudencia).
reros, recibidores y pagadores de las rentas de fábricas
y cofradias creadas en virtud del edicto de febrero de Cogulla. V. HABITo RELigioso.
170%, permanezcan unidos á las referidas fábricas y
cofradias con la carga de pagar las sumas señaladas Colar basianos. Sectarios de Colarbaso, he
en cada diócesis, segun las listas que se hayan aproba rege del siglo ll de la Iglesia, discípulo de Valenti
do en el Consejo y la reparticion hecha por los señores niano. A los dogmas y á los sueños de su maestro
intendentes y comisarios nombrados en union de los habia añadido que la generacion y la vida de los
obispos. Facilmente se conoce que estos edictos son pu hombres depende de los siete planetas; que toda la
ramente rentísticos y una consecuencia de las desgra erfeccion y plenitud de la verdad estaba en el alfa
cias que ocasionó la guerra de la sucesion de España. ¿ griego, puesto que Jesucristo se habia llamado
 COL 439) COL
alpha y omega. Filastro y Caronio han confundido á de qué religiones. Administran el bautismo metiº"
Colarbaso con otro herege llamado Baso; pero san do todo el cuerpo en el agua.
Agustin; Teodorelo y otros lo distinguen. S. Ireneo Hablando con propiedad, estos colegianos son los
y Tertuliano han hablado tambien de Colarbaso únicos que siguen en la práctica los principios de la
sus discipulos como de una rama de los valentinia reforma, segun los cuales, cada individuo es el único
nos. V. MARcosIANos. árbitro de su creencia, del culto que quiere dará
Dios, y de la disciplina que quiere seguir. Verdade—
Cola imas. V. OBLATAs.
ramente su comunion no pone entre ellos mas que
una union muy ligera y puramente esterior. En ella
*Coleeta. En la misa de la Iglesia romana y en no hay la unanimidad de creencia y de sentimientos
la liturgia anglicana significa una súplica ú ora ue recomendaba S. Pablo á los fieles. Philipp. c. 1,
cion conveniente al oficio del dia, y que el sacer .27. Los judios y los paganos, sin herir su con
dote recita antes de la epístola. En general todas las ciencia, podrian fraternizar con ellos.
oraciones de cada oficio pueden llamarse colectas,
porque el sacerdote habla siempre en ellas en nom Colegiata Iglesia servida por canónigos secu
bre de toda la asamblea, cuyos sentimientos y deseos lares ó regulares. El deseo de ver celebrar el oficio
reasume por la palabra oremus, roguemos; esta es la con las mismas pompas que en las catedrales, hizo que
observacion del ponlífice Inocencio III, por lo que en las ciudades en que no habia obispos se establecie—
en muchos autores antiguos la misma reunion de sen colegiatas, capítulos de canónigos, que viviesen
los fieles es llamada colecta.
en comnn bajo una misma regla como los de las igle
Algunos atribuyen el orígen de estas oraciones á sias catedrales. Un monumento de esta antigua disci
los pontífices Gelasio y S. Gregorio el Magno; pero plina son los claustros que ordinariamente acompa
es muy probable que estos dos papas, en sus Sacra ñan á estas iglesias. Cuando se introdujo la relajacion
mentarios, no han hecho mas que reunir y poner en de la vida canonical en algunas catedrales, eligieron
orden las oraciones que estaban ya en uso antes de los obispos aquellos canónigos que eran mas regula
ellos, y las han añadido para los nuevos oficios. res, formaron separaciones , y establecieron asi cole
Claudio Despense, doctor de la facultad de París, giatas en su ciudad episcopal. Insensiblemente ha ce
ha formado un tratado particular de las colectas, en sado la vida comun en las iglesias colegiatas, lo mis
el que habla de su origen, de su antigüedad y de sus mo que en las catedrales; esto es lo que dió origen á
autores, etc. las congregaciones de los canónigos regulares que han
El P. Le—Brum, Esplic. de las cerem., t. 1, p. 182, continuado viviendo en comun.
ha demostrado que estas colectas ú oraciones comu—
nes, que se hacen por el sacerdote en nombre de toda Colegio. Antiguamente se dió este nombre á la
la asamblea, son de la mayor antigüedad, y datan reunion de los apóstoles, y se llamó el colegio apos
del tiempo de los apóstoles. Quiere el espíritu del tólico; por analogia llamamos sagrado colegio al cuer
cristianismo que los deseos, las oraciones, las bue po de cardenales de la Iglesia romana, formado de
nas obras, sean comunes entre los fieles, y en esto 72 miembros: por alusion á los 72 discípulos del Sal
es en lo que consiste la comunion de los santos. Es vador.
tas oraciones al principio no se hallaban escritas, los
sacerdotes las trasmitian por tradicion, pero siempre X& C olegio de cardenales. El colegio de
hai espresado la é, las esperanzas, los sentimientos cardenales, que se llama tambien el sacro colegio, es
comunes de los fieles; la voz de la Iglesia entera la reunion de los cardenales divididos en tres Ordenes
es la que sale por boca de sus ministros. Se puede diferentes, seis obispos, cincuenta presbíteros y calor
pues poner en ella con entera certidumbre su creen ce diáconos. Cada una de estas Ordenes tiene su deca
cia y su doctrina. no ó presidente; el cardenal obispo de Ostia es el deca
COLECTA. Significa tambien la reunion de limos no de la Orden de los obispos y de todo el sacro cole
nas que se hacia en la primitiva Iglesia, para so gio. Segun la disciplina actual de la lglesia, el colegio
correr á los pobres de otra ciudad ó de otra provin de cardenales es la segunda autoridad eclesiástica en
cia; se hace mencion de ellas en las actas y en las en el orden gerárquico; porque un cardenal precede
epístolas de los apóstoles. y preside á todos los primados, arzobispos y obispos.
(Estractado del Diccionario de Jurisprudencia).
Colegianos. Nombre de una secta formada de
los arminianos y de los anabaptistas en Holanda. Se Cólera. Pasion que Jesucristo tuvo particular
reunen particularmente todos los primeros domingos cuidado de reprimir; todas sus máximas respiran la
de cada mes, y cada uno tiene en estas reuniones la dulzura, la caridad, la paciencia. «Bienaventurados,
libertad de hablar, esplicar la Sagrada Escritura, dice, los pacíficos, porque serán llamados hijos de
orar y cantar. Dios. bienaventurados los mansos, porque ellos p0
Todos estos colegianos son socinianos á arrianos, no seeran la tierra: sed misericordiosos como vuestro
comunican en su colegio, pero se reunen dos veces al Padre celestial: aprended de mí que soy manso y hu
milde de corazon, y hallareis el descanso de vuestras
año los de toda la Holanda en Rinsburgo, aldea situada
á dos leguas de Leyden, donde hacen la comunion. almas, etc».
No tienen ministro particular para darla, sino que La mayor parte de los antiguos filósofos autoriza
la dá el primero que se coloca en la mesa y alli la ron la ira y la venganza, y miraron la mansedum
recibe indiferentemente todo el mundo, sin ecsaminur bre como una debilidad. Algunos mas sensatos com
 COL 0) COL

¿? que la cólera es siempre injusta, que el nismo se reuAian un dia al año para tributar á la
ombre irritado quiere el mal de ¿ no su propio Vírgen un culto insensato, que consistia principal
bien; que la virtud que es la fuerza del alma, con mente en la ofrenda de una torta que comian des
siste principalmente en vencernos á nosotros mismos ues en su honor. Tomaron el nombre de la pala
y en reprimir los movimientos impetuosos del alma. ra griega colvRio que significa pequeño pan ó torta,
Muchos estóicos propagaron sobre este punto máxi Segun la narracion de este Padre, Haeres. 70 estas
mas muy buenas. Es indudable que de todas las pa mugeres adoraban á la Santísima Vírgen como una
siones la cólera es la mas capaz de desordenar la eco divinidad, y la tributaban el mismo culto que á Dios
nomia animal; muchas veces se ha visto espirará puesto ¿ concluye sus reflecsiones diciendo que se
personas de un carácter violento en un transporte de debe adorar al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo,
cólera. pero que no se debe adorar á Maria sino solo hon
La razon deberia bastará preservarnos de ella; pe rarla.
ro como observa con oportunidad un filósofo moder Basnage, Historia de la Iglesia, l. 20, c. 2 S.
no, para vencer una pasion y aun para quererlo es y siguientes, se ocupa mucho de esta heregia; dedu
necesario que el alma discurra, que examine, que ce de la refutacion de S. Epifanio, que segun este
se las razones de obrar ó de abstenerse: ahora bien, Padre no se debe tributar ningun culto religioso á
¿ argumentos de la razon se suceden con lentitud, Maria; argumenta, segun su costumbre, sobre el sen
dámpulsos del sentimiento, por el contrario, son tido equívoco de la palabra adorar y adoracion. He
odisos y arrastran al hombre sin dejarle deliberar mos dicho ya, y él mismo conviene en ello, que en
sobre el partido que debiera tomar. Ante las pa su orígen adorar significa simplemente saludar, ha
siones tumultuosas, la razon enmudece; deja al cer reverencia ó prosternarse, manifestar respeto
hombre indefenso en medio del peligro, y solo da con una señal esterior; y por esto los autores sagra—
armas cuando no las necesita; la recobramos para dos lo emplearon indistintamente respecto de Dios,
abrumarnos con la vergüenza y el remordimiento de los ángeles y de las personas. Respecto de Dios sig
despues de nuestra derrota. Unicamente la religion nifica el culto supremo é incomunicable, respecto
puede sostenernos en el combate ó consolarnos de de los ángeles un culto religioso y subordinado; res
nuestra debilidad con la esperanza del perdon. Véase pecto de los hombres un culto puramente civil. Lo
PASION. mismo sucede con la palabra culto que en su sentido
COLERADE DIOS. Esta, dice S. Agustin, no es mas primitivo solo significa respeto, honor, reverencia,
que la justicia con que castiga el crimen; no es en Dios veneracion, El culto es ó religioso ó puramente civil,
una pasion ni turbacion del alma como la cólera del segun el objeto á que se dirije, y según el motivo por
hombre, sino una perfeccion que la Escritura espresa el que se tributa. V. culto.
diciendo: «Wos, Señor Todopoder oso, vos juzgais uando los PP. de la Iglesia y los escritores ecle
con una tranquilidad perfecta»: l. 13 de Trinit., c. 16. siásticos han entendido por adoracion el culto supre
Todo castigo, añade, es llamado cólera de Dios; pe— mo, han dicho como S. Epifanio, que solo se debe
ro regularmente Dios castiga para corregir y algunas adorar á Dios, y honrar á los santos; tambien nos
veces para condenar. Segun la Escritura, castiga á otros lo decimos y en el mismo sentido. Pero sostene
todo hijo que ama, pero castiga para condenar, cuan mos que el honor que damos á los santos, á los án
do separando á los impíos á su izquierda les diga: id, geles, á las imágenes y á las reliquias, es un culto,
malditos al fuego eterno». Serm. 2. in ps. 58, n. 6. puesto que honor y culto son sinónimos; añadimos
«Todo cuanto padecemos en este mundo es un cas— que es un culto religioso, puesto que damos por moti
tigo de Dios ¿¿
denarnos al
corregirnos
que quiere 22, para no con
c. 3, n. 3. Serm. 171 de vo de religion, con motivo
del respeto que tenemos al
mismo Dios, Respetamos y honramos en los santos el
Verbis Apostolic., Enar. in ps. 102. n. 17 y 20, etc. amor que Dios les tuvo, las gracias de que los colmó,
Lo que en este mundo llamamos cólera de Dios, es la felicidad eterna á que los elevó; y el poder de inter
muchas veces un efecto de su misericordia. Lac cesion que se dignó concederles, por esto honramos
lancio, que compuso un tratado sobre la cólera de sus imágenes y sus reliquias. Cuando dicen que los
Dios, se limitó á probar contra Epicuro que Dios re adoramos, si quieren eniender por esto que nos incli
compensa la virtud y castiga el crimen. V. Jusricia namos que nos hincamos de rodillas, que nos proster
DE Dios. namos, para manifestar nuestro respeto, no disputa
Coletanos. Franciscanos asi llamados de la
remos sobre la palabra, puesto que lo mismo hace
mos respecto de las personas, aunque con diferente
B. Coleta Boylet de Corbie, cuya reforma abrazaron motivo. Si deducen como Basnage y los demas pro -
al principio del siglo XV. Conservaron este nombre testantes que los tenemos el mismo respeto º á
la reunion de todas las reformas de la Orden Dios, y les tributamos el culto supremo que á él solo
de S. Francisco, verificada en 1517 en virtud de una se debe, responderemos que esta imputacion es un
bula de Leon X. Por la misma razon las religiosas co rasgo de mala fé y de malignidad.
letínas tomaron el nombre general de observantes ó De que unas mugeres y estupidos ignorantes ha
clarisas.
yan pecado por esceso en esta devocion, de que es
critores poco instruidos, que no pesaban el valor de
Cola rdianos. Antiguos hereges que daban á las, palabras se hayan esplicado mal sobre este punto,
la Virgen un culto exagerado y supersticioso. San nada se sigue contra la creencia ni contra la doctri
Epifanio, que hace mencion de ellos, dice que las na de la Iglesia católica, mi contra las prácticas e
mugeres de la Arabia preocupadas con el colirdia ésta aprueba; no está obligada á mantener pr Ole
 COL 1) COL
sores de gramática para deshacer los equívocos, los precede y lo que sigue, se verá que el único deseo de
sofismas y las calumnias contínuamente renovadas por San Pablo es apartar á los colosenses de las prácticas
los protestantes. Cien veces han sido refutadas, y otras del judaisino á las que faltos apóstoles habian querido
tantas, las han reproducido, porque son un pretesto sujetarlos. Asi en la palabra cELIcoLAs hemos visto
para alucinar á los sencillos y mantener su preocupa que los judios habian sido acusados de adorar á los
cion. V. CULTo, MARIA, sANTos, máGENEs. ángeles, es decir, las intrigas ó génios de que se creian
Si las mugeres de la Arabia solo hubieran ofrecido animados los astros; culto no solo supersticioso sino
tortas á la Vírgen para suplicarla que diese gracias á idólatra espresamente prohibido por la ley de Moisés,
Dios por el alimento que se digna conceder á los hom y mucho mas contrario á la doctrina de Jesucristo;
bres, esta costumbre hubiera sido muy inocente: por por esto añade el apostol que estas gentes no estaban
ella solo hubieran reconocido estas mugeres en Maria unidas al divino Salvadorque es el gefe de la Iglesia y
un poder de intercesion. Si se las ofrecian en la per la fuente de todas las gracias. Pero no podemos hon
suacion de que siendo la madre de Dios les concedia rar é invocará los ángeles, de los que se hace men
este alimento por su propio poder y con intencion de cion en la Sagrada Escritura, por que son los minis—
pedirla su continuacion, entonces era un culto su tros y los embajadores de que Dios se ha servido para
persticioso con tendencia á la idolatria, procedente anunciar á los hombres los misterios de Jesucristo?
del mismo motivo por el que los paganos hacian ofren Este divino Salvador, despues de su ascencion á los
das á los dioses. V. IDoLATRIA. cielos, envió á estos espíritus bienhechores para li
bertará S. Pablo de las cadenas, para revelar á San
Color. Hay costumbre en las iglesias griega y Juan los destinos de la Iglesia, etc., el honrarlos no
latina de distinguir los oficios de los diferentes miste es, pues, separarse de Jesucristo, puesto que no se les
rios y de las diferentes fiestas con ornamento de di atribuye otro poder que ejecutar su voluntad en la tier
versos colores. En la Iglesia latina se usan general ra. V. ANGEL.
mente solo cinco colores, que son el blanco, encarna. Tampoco se resucita el judaismo practicando abs
do, verde, morado y negro; la Iglesia de Paris tiene tinencias, no por los motivos que lo hacian los judios.
además el amarillo, el color de ceniza. En algunas dió sino para cumplir el precepto que S. Pablo impone á
cesis usan el azul en las festividades de la Virgen. Se los colosenses en esta misma carta c. 3, y . 5, de mor
pueden ver en las rúbricas del misal y en los directo tificar los deseos desarreglados de la carne, en cuyo
rios ú ordo los oficios á que corresponde cada uno de número se debe colocar la glotoneria. V. AbsTINENCIA.
estos colores
Los griegos modernos no se cuidan de esta distin Columbo (San). Hubo antiguamente en las is
cion de colores, usan el encarnado en la Natividad y las británicas una congregacion de canónigos regula
en los entierros. Los anglicanos solo han conservado res de este nombre que era muy estensa y se componia
el negro para las exéquias de los difuntos. de cien monasterios. Habia sido establecida por San
Columbo, Coln ó Colmkillo, irlandés de nacion, que
Coloritas. Congregacion de agustinos llamados vivia en el siglo XVl, al que llaman tambien S. Co
asi de Coloritos, monte pequeño inmediato á la aldea lumbano; pero es necesario no confundirlo con otro
de Morano de la diócesis de Cassano en la Calabria San Columbano, compatriota suyo y contemporáneo,
citerior. Bernardo Rogliano se retiró en 1530 á una fundador y primer abad del monasterio de Luxeuil en
cabaña próxima á una iglesia dedicada á la Virgen el Franco-condado. Hay todavia una regla en verso,
sobre este monte, y empezó la institucion de la con que se cree haber sido dictada por San Columbo á sus
gregacion de los Coloritas. canónigos ó monges, que ha sido sacada de las reglas
de los antiguos monges del Oriente. V. Vidas de los
Colosen ses. La carta de S. Pablo á los colo Padres y de los mártires, 9 de junio.
senses les fue escrita desde Roma el año 62, cuando
Colutianos. Herejes del siglo IV, secuaces de
el apóstol estaba allí entre cadenas. Para preservará Collutho,
estos nuevos fieles de cualquier tentacion de volver sacerdote de ¿ Escandalizado este
al judaismo ó al paganismo, les dió S. Pablo la mas sacerdote de la condescendencia que S. Alejandro,
elevada idea de Jesucristo, del beneficio de la reden patriarca de esta ciudad, tuvo al principio con Arrio,
cion, de la gracia que Dios les hizo llamándolos á la con la esperanza de atraerlo por la dulzura, formó
fé, y las mas sabias lecciones de su conducta. cisma, tuvo asambleas separadas, y aun se atrevió
Hay mucha semejanza entre estacarla y la que San tambien á ordenar sacerdotes bajo el pretesto de que
Pablo escribió al mismo tiempo á los efesios; en mu este poder le era necesario para oponerse con buen
éxito á los ¿ del arrianismo. Bien pronto al
chos pasajes de las dos emplea el apóstol las mismas
espresiones. cisma añadió el error; enseñó que Dios, no ha criado
Han insistido mucho los protestantes sobre el y. 18 á los malvados, y que no es el autor de los males que
del c. 2, donde dice S. Pablo «que nadie os seduzca nos afligen: Osio le hizo condenar en un concilio que
por afectacion de humildad, y por el culto de los án convocó en Alejandria el año 319.
geles, caminando en un camino que no conoce, y lle
no de un orgullo vano y carnal». Han deducido de es Colybos. Nombre que los griegos dieron en su
to que S. Pablo reprueba toda clase de culto tributa liturgia á una ofrenda de trigo y de legumbres coci
¿? los ángeles. Tambien y. 20 y 21, condena las das, hecha en honor de los santos y en memoria de
abstinencias que ciertos doctores querian prescribirá los difuntos. Balsamon, el P. Gaor y Leon Alsacio es
los colosenses; pero si se lee atentamente todo lo que cribieron sobre esta materia.
 (COM kk2 (COM

Los griegos hacen cocer una porcion de trigo y lo sino en el sentido de un pequeño número de pasages,
ponen en pequeños montones sobre un plato, añaden su unanimidad en todos los demas demuestra la ver
guisantes machacados, nueces picadas, pepitas de dad que todos han visto del mismo modo.
uva; lo dividen en muchas porciones separadas por Qué multitud de comentarios no se han hecho so
hojas de peregil, y á esta composicion dan el nombre bre los poetas griegos y latinos. Sin duda que no prue
de kolvBA. ba esto que aquellos autores sean ininteligibles, sin
Tienen una fórmula particular para la bendicion de embargo de que hace poco tiempo que se ha empezado
los colybos por la que piden á Dios la bendicion de este género de trabajo; en lugar de que con la Sagra
estos frutos y la de los que han de comer, porque los da Escritura se ha verificado en todos los siglos.
ofrecen á su gloria en memoria de tal santo ó de al Las ordenanzas de nuestros reyes sin duda que no
gunos fieles difuntos. Balsamon atribuye á S. Atana son un caos de obscuridad; sin embargo ¿á qué mul
sio la institucion de esta ¿ el Synara— titud de comentarios han dado lugar?
rio, que es un compendio de vidas de santos, fija su Pero la necesidad de estos comentarios prueba de
origen en tiempo de Juliano el apóstata; dice que ha masiado cuán necesaria es á los simples fieles otra re
biendo hecho este príncipe profanar el pan y los de— gla de fé ademas de la Sagrada Escritura para esta
mas géneros que se vendian en el mercado de Cons blecer y dirigir su creencia. No se concibe cómo los
tantinopla al principio de la cuaresma con la sangre reformadores que han establecido por principio que la
de las carnes inmoladas, mandó el patriarca Eudoxio Sagrada Escritura es la única regla de fé han osado
á los cristianos que solo comiesen colybos ó trigo co querer esplicarla ellos mismos. Siendo clara ¿qué ne
cido, y que en memoria de este suceso acostumbraná cesidad tiene de esplicacion? Si los fieles se hallan en
bendecir y á distribuir los colybos á los fieles el pri derecho de no tener ninguna consideracion á esta
mer sábado de cuaresma. misma esplicacion, de qué puede servir? Y es nece
Se puede consultar un breve Tratado sobre los coly sario observar que los pasages en que los protestantes
bos, escrito por Gabriel de Filadelfia en respuesta á han fundado su nueva creencia y su separacion de la
las imputaciones de algunos escritores de la Iglesia Iglesia romana, justamente son los que les han pare
latina que desaprobaban este uso; tratado que M. Si— cido tener mas necesidad de esplicacion. De lo que
mon imprimió en Paris en griego y en latin connotas. resulta que su fé no esta fundada en el testo, sino en
la esplicacion que de él hacen, ó en el sentido que le
Comentarios, Comentadores. Interpre atribuyen. A menos que no sea infalible su esplica
tacion de los libros santos; autores que los han espli cion, es muy peligroso que su fé no sea un error, lo
cado. Libros que existen, unos hace diez y ocho siglos, mismo que su método es una contradiccion.
otros cuatro mil años; que estan escritos en lenguas Los protestantes tienen el mayor interes en desa
muertas, que pintan usos y costumbres muy diferen creditar las esplicaciones de la Sagrada Escritura, da
tes de los nuestros; que contienen una doctrina que das por los PP. de la Iglesia y por los intérpretes de
veinte clases de herejes han procurado corromper, no todos los siglos, con el objeto de persuadir que estos
pueden ser tan fáciles de entender como los libros libros divinos no han sido bien entendidos hasta que
modernos. Es, pues, necesario para esplicarlos hom los reformadores y sus discípulos han mostrado su ín
bres que hayan estudiado las lenguas, la historia, los teligencia; por lo que no han faltado á esto: es impo
costumbres antiguas, la geografía, la historia na sible hablar de los comentadores en general con ma
lural, etc., que hayan acercado y comparado los pasa yor desprecio que lo ha hecho Mosheim en su Historia
jes, que hayan consultado la tradicion; y todos estos eclesiástica, y en sus Instrucciones sobre la historia
conocimientos no son tan fáciles de reunir. Los comen cristiana del primer siglo.
tadores mas estimados son los que los han poseido en Desde esta época, empezando por S. Bernabé, les
el mas alto grado, los que se han dedicado mas á de echa en cara haber seguido el mal método de los ju
senvolver el sentido literal y natural de los autores díos, haber descuidado el sentido literal de los libros
sagrados. La multitud de sus comentarios es inmensa; santos y haberlo desfigurado con esplicaciones mis
0demos convencernos de esto por la obra del P. Le teriosas y alegóricas. A este defecto esencial los del
long, titulada Biblioteca sacra. siglo II han añadido un respeto supersticioso por la
Unos han trabajado sobre toda la Sagrada Escritu version de los Setenta. En el Ill, Orígenes, á pesar de
ra, otros sobre ciertos libros en particular, algunos se sus inmensos trabajos sobre el testo de la Escritura
han limitado á discutir un solo hecho de la Escritura, Santa, ha comunicado á los escritores de su tiempo y
ó un pasaje que parecia mas obscuro que los demas. á los que le han seguido un gusto frívolo por las ale
Muchos lo hicieron para establecer y apoyar los dog— gorias. En el IV, S. Gerónimo, sin embargo del cuida
mas de la fé católica, los heterodoxos para fundar sus do que tuvo para aprender el hebreo, no ha estado
opiniones particulares y sus errores. libre de defecto, lo mismo que S. Agustin. Segun él,
En vista de esta multitud de volúmenes, han dicho este Padre ha salido mal con su intento cuando ha
los incrédulos que la Sagrada Escritura era un libro querido dar reglas para la inteligencia del lesto sa
indescifrable, puesto que han sido necesarios tantos grado. En el V. no hace favor mas que á los co
trabajos para enseñar su sentido. No han observado mentarios de Teodoreto sobre el nuevo Testamento, á
que los comentadores han escrito unos en Italia, otros los de S. Isidoro de Damieta; porque se han dado al
en Francia, estos en España, aquellos en Alemania ó o menos que los demas por el mal gusto reinante y á
en Inglaterra, en diferentes siglos, y en las diversas os de ¿ de Mopsueta conservados por los nes
comuniones cristianas entre los mismos judios; con fre torianos. Desde el siglo VI casi se han limitado los in
cuencia todos dicen lo mismo; no se hallan divididos térpretes á darnos las cadenas de los PP. catenae Pa
 COM kk3 COM
trum, y han perpetuado de este modo el vicio nacido los pesos y de las medidas de los hebreos; las respues—
en el siglo I hasta la aparicion de la reforma. tas de S. Agustin á las objeciones de los Maniqueos etc.
Hé aqui, pues, desde la muerte de los apostoles, y son obras de erudicion que podrian hacer honor á los
durante un espacio de 1500 años, á la lglesia cristiana sabios de nuestro siglo, y estos deberian ser mas agra
privada de la verdadera inteligencia de la Escritura, decidos á los ausilios que de ellas han sacado. Otro
la que, sin embargo, segun el dictámen de los protes gran número de obras de los primeros siglos, no me—
tantes, debia ser la única regla de su creencia. Dán nos apreciables, han perecido por la desgracia de los
dole pastores y doctores, los apóstoles olvidaron pres— tiempos. Las Hexaplas de Orígenes habrian contri
cribiries el modo como debian esplicar este divino li buido mas á la inteligencia de la Sagrada Escritura
bro. El Espíritu Santo, que al principio habia prodi que el comentario mas sabio.
gado el don de lenguas á los primeros fieles, no tuvo Es ridículo echar en cara á los antiguos PP. su res
a bien concedérselo á los que tenian mas necesidad peto por la version de los Setenta, puesto que entonces
de él, á los que debian predicar al pueblo la palabra
no habia otra que fuese conocida; á escepcion de san
pura de Dios: los apóstoles que habian recibido la Mateo, los evangelistas y los apóstoles se sirvieron de
plenitud de aquel no se han tomado el trabajo de ha ella. Desde el siglo III Orígenes conoció que no era
cer una version mas pura y mas exacta que la de los necesario limitarse á ella, puesto que en sus Hexa
Selenla. ¿ y en sus Octaplas, la comparó con el testo he
Han obrado lodavia peor ellos mismos; han puesto reo, y con todas las demas versiones griegas que
esta version falsa en manos de los fieles, que eran in— udo encontrar. Es todavia mas absurdo el parecer
capaces de conocer sus delectos, y ellos son los que es mal el que no hayan aprendido el hebreo en un
han dado á los PP. de la Iglesia el ejemplo de las es— tiempo en que absolutamente no habia medio de es—
plicaciones alegóricas de la Sagrada Escritura; la tudiarlo, y cuando los judíos hacian todos sus esfuer—
prueba de esto está en el Evangelio y en las cartas zos para quitar el conocimiento de él á los cristianos;
de S. Pablo. Asi, los incrédulos han tenido gran cui sabemos cuántos trabajos y cuidados costó á S.Geró
dado de aplicar á los apóstoles y á los evangelistas el nimo el recibir lecciones de esta lengua.
cargo que los protestantes hacen á los antiguos co Para entender la Sagrada Escritura, los PP. de los
mentadores. ¿Han podido ignorarlo Mosheim y sus primeros siglos tenian una regla mas infalible que las
iguales? de la gramática hebrea, á saber: la tradicion de las
Eslas dos consideraciones bastan para justificar á Iglesias apostólicas, conservada por los discípulos in—
los antiguos PP.; pero si en sí misma examinamos su mediatos de los apóstoles y transmitida sin interrup
conducta, los hallaremos tan culpables como se pre cion á sus sucesores. Hé aquí lo que ha dado lugar á
tende? Es cierto que los comentadores modernos, pro formar las cadenas de los PP., el reunir y comparar
testantes ó no, han producido tan grandes maravillas las esplicaciones que habian dado estos autores res
tomando un camino enteramente opuesto? Esto mere etables de los pasages cuyo sentido se disputaba por
ce un poco de reflexion. os hereges. ¿Y en qué tiempo? A fines del siglo V ó
Los PP. han buscado en la Sagrada Escritura lec— durante el VI, inmediatamente despuesde las prime—
ciones propias para santificar las costumbres, y no co ras irrupciones de los bárbaros. Las obras mas cono
nocimientos capaces de lisonjear el orgullo y la cu— cidas de estas son la de Olympiodoro, monge griego
riosidad; han creido que este libro divino nos ha del V ó del VI siglo, sobre el libro de Job, se halla en
sido dado para inspirarnos virtudes, mas bien que la Biblioteca de los PP.; la de Victor, obispo de Capua,
para enriquecernos con una vasta erudicion. Sus co del año 55 sobre los cuatro evangelios; la de Prima—
mentarios son, sin duda, menos sábios que los de los sio, obispo de Adrumeta en Africa en 553, sobre las
modernos, pero son mas edificantes y cristianos; si no epístolas de S. Pablo; la de Procopo de Gaza, retórico
ponen la letra mucho mas clara, tienden mas direcla y sofista griego, que escribió hácia el año 560, sobre
mente á hacernos conocer su espíritu, que vale mucho Isaias y sobre otros libros de la Sagrada Escritura.
mas. Han hecho grande uso de esplicaciones alegó Se temia entonces con razon que la mayor parte de
ricas, porque este era el gusto de su siglo; estaban los monumentos eclesiásticos fuesen bien pronto des
obligados á conformarse con él. Véase ALEGoRíA. ¿Qué truidos por el furor de los bárbaros; se esforzaban en
han hecho los intérpretes socinianos y protestantes? conservar los restos, y los hechos han probado cuán
bien, fundado era este temor. La multitud de hereges,
llan considerado á los escritos de los autores sagra
dos como consideran á los de Homero, Aristóteles, que habian aparecido en los siglos precedentes, ha
cia conocer la necesidad de atenerse á la tradicion, y
Plinio y demas profanos; no hay en ellos mas piedad
en las notas de los unos que en las de los otros. de tener siempre á la vista sus pruebas. La imperfec—
El mismo Mosheim ha hecho una larga disertacion cion de sus obras no proviene, pues, del gusto de sus
contra los intérpretes que han llenado sus comenta autores, sino de la necesidad de las circunstancias.
Por mas que digan los protestantes no son inútiles es
rios con esplicaciones, alusiones, comparaciones y ob—
servaciones sacadas de los autores profanos. Syntag.
tas complicaciones, puesto que son cadenas de la tra
Dissert. ad sanctiores Disciplin. pertin., p. 166. dicion; por otro lado, hallamos en ellas algunos frac
mentos de libros antiguos que ya no ecsisten. Tam
Se nos engaña por otro lado, cuando se nos quiere
persuadir que los PP. se limilaron á esplieaciones poco debemos hacer caso de lo opinion que tienen de
alegóricas. Los libros de S. Gerónimo de los nombres esto nuestros adversarios, de lo cual ellos mismos se
y de los lugares hebreos, las cuestiones hebráicas sobre hacen monumentos de antigüedad; no tratarian de
el Génesis, sus comentarios sobre los profetas, un gran quitarnos nuestras guias, si no tuviesen deseos de
número de sus cartas, el tratado de S. Epifanio de estraviarnos.
 COM 4j (COM

Pretende Mosheim que en los siglos medios has de la enseñanza del soberano pontífice, la hay pública
ta el nacimiento de la reforma, los pontífices se ha uniforme de las diferentes iglesias que componen
bian opuesto con todas sus fuerzas á que los legos pu i, sociedad general, que llamamos lglesia católica,
diesen leer y entender la Sagrada Escritura... Como enseñanza de cuya uniformidad estamos seguros por
no podemos atribuir esta calumnia á la ignorancia de la comunion de fé y de creencia que reina entre ellas.
aquel crítico, estamos precisados á hacerlo á su nua Pero los protestantes no se enmendarán nunca en la
lignidad. Es público y notorio que hasta el siglo X la mala costumbre de desigurar nuestra doctrina.
lengua latina fue en todas las Galias el lenguage, no Veamos, por último, las maravillas que han obrado
solo de la religion sino tambien de todos los actos pú los reformadores y sus discípulos con sus comentarios
blicos y de todos los libros; que el pueblo lo enten y sus sábias esplicaciones de la Sagrada Escritura.
dia por lo menos tan bien cono los habilantes de las El mismo Mosheim no nos dá de esto una idea muy
diversas provincias de Francia que tienen dialectos ventajosa; conviene en que los luteranos se dedicaron
articulares, entienden en el dia el francés. Es, pues, mas á la controversia que á la esplicacion de los li
incontestable que, al menos hasta entonces, podia ser bros santos, que se detenian mucho en buscar en ellos
leida y entendida por todos los que sabian leer. ¿Pue sentidos misteriosos, que aplicaron á Jesucristo y á
de citarse solo un decrelo de los pontífices que les ha las revoluciones de la Iglesia muchas de las antiguas
ya prohibido esta lectura? profecias que no tenian ninguna relacion con ella.
No es menos cierto que en esta época y en los tres Efectivamente, vemos que en sus comentarios han
ó cuatro siglos siguientes, solo los clérigos sabian leer rocurado menos buscar el verdadero sentido de
y escribir; y que el uso de las letras era tenido por os pasajes, que en torcerlo para acomodarlo á sus
los nobles como una señal de plebeyo: ¿alribuiremos pretensiones, y siempre que han cambiado de parecer
esta bárbara oscuridad á los pontífices que no han de no han dejado de ver en la Sagrada Escritura el sen
jado de esforzarse para disiparla? Tenian en ello el tido mas conforme á sus nuevas opiniones; asi no es
mayor interés, puesto que la ignorancia grosera de el sentido que se percibe á primera vista en los libros
los siglos de que hablamos dió origen á la multitud de santos el que ha reglado su conducta; esta, al contra
sectas fanálicas que perturbaron al mismo tiempo á rio, es la que ha decidido del sentido de los autores
la Iglesia y á la sociedad, lo mismo en Italia que en sagrados. ¿Era este el medio de hallar infaliblemente
otras partes. Sin una ciega prevencion no se puede ne la verdad?
gar que el clero hizo todo lo We podia para conservar Echa en cara á Calvino y sus adeptos el haber
y renovar el uso de las letras. V. LETRAs, ARTEs, CIEN aplicado á los judios la mayor parte de las profecias
CI As, etc. que se referian á Jesucristo, y haber quitado asi al
Para ilusionará los ignorantes sostiene Mosheim que cristianismo una parte esencial de sus pruebas. ¿Se
en union con los papas el concilio de Trento ha puesto pueden imputar semejantes atentados á los comenta
un obstáculo invencible á loscatólicos para la verdade dores católicos?
ra inteligencia deia Sagrada Escritura, declarando la Esta disension, que se levantó desde luego entre los
vulgata auténtica, es decir, segun él, fiel, esacta, per— luteranos y los calvinistas sobre el verdadero sentido
fecta, libre de toda réplica, imponiendo álos comentado de las Escrituras dura todavia entre estos últimos.
resla dura ley deno entenderjamásla Sagrada Escritu Grocio, que ha hallado un gran número de partida
ra, en materia de fé y de costumbres, mas que conforme rios, sobre todo entre los socinianos, ha sostenido que
al sentimiento comun de la Iglesia y de los Padres, decla la mayor parte de las profecias, aplicadas á Jesu
rando, por último, que sololáIglesia, es decir, el Papa cristo por los autores del nuevo Testamento, designan
ue es su gefe, tiene el derecho de determinar el ver otros personages en el sentido directo y literal; pero
¿ro sentido, y la verdadera significacion de la Escri que en un sentido misterioso y oculto representan al
¿? Hist. Ecles. siglo XVI sect. 3.° 1.° part. c. 1. Hijo de Dios, sus funciones, sus sufrimientos, etc. Co
ceyo, que tambien ha tenido discípulos, al contrario,
1." Es falso que el decreto del concilio de Trento, considera toda la historia delantiguo Teslamento como
con respecto á la autenticidad de la vulgata, tenga, un tipo y una figura de la de Jesucristo y de la
el sentido que Mosheim le dá maliciosamente; proba Iglesia cristiana; pretende que todas las profecias se
remos lo contrario en la palabra VULGATA. Su traduc refieren directa y literalmente áJesucristo, y predicen
tor ha tenido la buena fé de convenir en ello en una todas las revoluciones que deben suceder en su Igle
nota. tom. 4, p. 216. sia hasta el fin de los siglos. En lugar que este ha
En 2.° lugar, la dura ley impuesta á los comenta— visto á Jesucristo en todas partes, Grocio no lo ha vis—.
dores por este concilio tenia ya lo menos 800 años to en ninguna, al menos en el sentido directo, natu
de antigüedad: el concilio in Trullo celebrado el año ral y literal de las palabras.
692, y cuyos decretos forman todavia la disciplina de Por su parte, un gran número de teólogos angli
la lgleria oriental, mandó, can. 20, que si sobrevenian canos no han hecho ningun caso de estos comentado
disputas entre los pastores sobre el sentido de la Es— res modernos; han sostenido que no se deben inter
critura, se resolviesen segun el sentir y las luces de pretar los libros sagrados en materia de fé y de cos
los antiguos doctores de la Iglesia. Veremos en la pa lumbres mas que en el sentido que les han dado los
labra TRADICION que ellos mismos siguieron esta regla doctores de la Iglesia naciente. A la verdad que han
esplicando la Sagrada Escritura. sido atacados vigorosamente por otros; se les ha
Y en tercer lugar, es falso que el Concilio de Tren echado en cara que abandonaban el principio funda
to haya entendido en su decreto por nuestra santa ma mental de la reforma, que es que en materias de fé
dre Iglesia el papa, que es su gefe. Independiente y de interpretacion de la Escritura, cada uno está en
 - COM 45 COM
derecho de referirse en esto á su propio juicio, sin ser el que está contento con el suyo? ¿Por qué ton, rá
subyugado por ninguna autoridad humana, . parte en los furores de la guerra el que vive en paz
Asi, desde que se ha seguido este principio mara con todos los hombres? ¿Tendrá gustó en poseer mer.
villoso, se han visto levantarse veinte sectas diferentes caderias estranjeras, ó en derramar sangre humana
en el seno del protestantismo, formar bando separa el que se contenta con lo necesario y que considera
do, defender con la Biblia en la mano que su doctrina como un crímen asistir únicamente á un homicidi,
era, la única verdadera. Ninguna de eslas sectas ha cometido por otro? Divin. Inst. l. 5, c. 8. Séneca,
hecho mavor número de comentarios sobre los libros Natural. quaest. 1.5, c. 18, ha condenado con mu
santos que los socinianos; ninguna ha llevado mas al cha mas fuerza que Lactancio el furor de arrostrar
esceso las sutilezas de la gramática y, de la crítica; los peligros de la mar, ora para hacer la guerra, ora
ninguna ha lograde mejor pervertir el sentido de la para el comercio. No se dice nada del primero porque
Escritura; convienen en esto los demas protestantes. es un filósofo ; se censura al segundo porque es un
Asi, este libro divino y los comentarios, lejos de reu Padre de la Iglesia. Ambos han juzgado que el co
nir los ánimos en una misma creencia, han llegado á mercio marítimo proviene ordinaríamente de una am
ser una fuente perenne de divisiones, y lo continuarán hicion desarreglada de enriquecerse; que bien cons
siendo hasta que plazca á todos los ánimos rebeldes derado, ha hecho á las naciones mas mal que bien;
reconocer la sabiduria y la necesidad de la ley que la cuando se le mira con ojos cristianos ó filosóficos es
Iglesia católica ha impuesto á todos los comentadores, difícil pensar de otro módo.
y la que ella ha seguido en todos los siglos. V. EscR1 Se sabe por otro lado cómo se hacia el comercio en
ruRA SANTA. los tiempos antiguos; no habia ni leyes para dirigirlo,
¿ No es singular que los protestanles, que entre ni policía para prevenir sus abusos, y la concurren —
ellos no convienen en el modo mejor de interpretar cia de los comerciantes no era muy grande para re
la Sagrada Escritura, que disputan sobre una infini primir su avidez. Si se juzgase de él por las súplicas
dad de pasajes muy importantes para la fé, para las que Ovidio les hace decir en sus Fastos, seria necesa-.
costumbres, para el culto, que muchas veces dan rio deducir de ello que todos eran gentes poco hones
cinco ó seis esplicaciones diferentes á una espresion as y que era infame su profesion. Aunque los PP. de
ó á una frase en su Sypnosis de los escritos , se obsti la Iglesia hubiesen tenido de él la misma opinion que
nen, sin embargo, en sostener que la Sagrada Escritu. este p0ela, ¿deberíamos admirarnos de esto? En los
ra es clara, inteligible á todos los hombres, aun á los siglos groseros, dice un escritor moderno, el come.
mas ignorantes; que cada uno se halla en estado de ciante es engañador, mercenario, limitado en sus
comprender su verdadero sentido, para formar su miras; pero á medida que su arte hace progresos lle—
fé y dirigir su conducta? Nos bastará decirles que ga á ser exacto, honrado, íntegro, y emprendedor.
segun S. Pedro, toda profecía de la Escritura no se Ferguson, Ensayo sobre la Historia de la sociedad ci.
hace por una interpretacion particular; II, Petri, vil, t. 2, c. .
c. 1, y. 20, que debe entenderse por el mismo esp Lo mismo sucedia con el oficio de las armas du -
ritu que la ha dictado; ellos han hallado cuatro ó cin rante los alborotos, las sediciones, las guerras de los
co modos de torcer el sentido de estas palabras, y nos diversos pretendientes al imperio. Ademas de la ido.
ponen en ridículo, porque para evitar este abuso, nos latría de que los soldados estaban obligados á hacer
atenemos á las lecciones de los que Dios ha estableci— profesion, su ratería los hacia odiosos; los PP. no
do para enseñarnos. erraban en inspirar á los cristianos se apartasen de
este estado. Pero nuestros nodernos censores hallan
Comercio. Se acusa á muchos PP. de la Igle mas fácil vituperar á los PP. que examinar las razo -
sia de haber condenado el comercio como criminal en nes que les ¿ á hablar. Para poder acusará
sí mismo y como opuesto al espíritu del cristianismo. S. Juan Crisóstomo se ha citado la obra imperfecta
Barbeyrac hace este cargo, á Tertuliano y á Laelan sobre S. Mateo, que no es suya.
cio; otros se lo han hecho á S. Juan Crisóstomo; bas
ta referir sus palabras para disculparlos. - Comida. No es del caso tratar del modo cómo los
«Ningun arte, dice Tertuliano, ninguna profesion, patriarcas, los judios y los demas pueblos hacian sus
ningun comercio que sirve en algo para dirigiró for cºmidas ordinarias; es asuuto que pertenece á la
mar ídolos, puede hallarse libre del crímen de ido historia antigna. Nos limitaremos á observar que no
latria..... es una mala escusa decir, yo no tengo debemos admirarnos de que los judios tuviesen re
otra cosa con que cirir, etc.» De Idolat., c. 11 y 12.
pugnancia en comer con los paganos. Estos, no solo
Sostenemos que esta decision de Tertuliano es exac usaban, de muchas viandas que les estaba prohibido
tamente verdadera. De nada sirve objetar que un comer á los judios, sino que practicaban en sus con
cristiano no puede vender nada, que aunque bueno dºs muchos actos supersticiosos y que conducian á la
y útil en sí, no pueda ser un instrumento de desór— idolatria; invocaban á los dioses y les daban gracias;
den y de crímen; esta consecuencia es falsa, porque les hacian libaciones; muchas veces colocaban sobre
es muy general. S. Pablo ha dicho: Si mi alimento la mesa los ídolos de los dioses lares ó de los dioses
escandaliza á mi hermano, no comeré carne en toda pataicos. Es muy probable que las ceremonias relil
la vida: 1 Cor. c. 8, y . 13. Rom. c. 1, y . 21. ¿Se giosas que siempre mezclaban los antiguos ensos co
sostendrá que el coner carne, no es una cosa buena midas han sido la causa por que varios pueblos admi
y útil en sí? . - - tian con dificultad á los estranjeros en sus comis.
«¿Por qué, dice Lactancio, un hombre justo an Verdaderamente que aunqúe, los judios sufrieron
dará sobre la mar, ó irá á buscar un pais estranjero, guerras sangrientas y vejaciones de todas clases por
TOMO I. (32
 COM 6 COM .

parte de los reyes de la Siria; llevaron hasta el es abusos que los obispos mas santos y celosos, como San
iremo su aversion hácia los paganos. En tiempo de Ambrosio y S. Agustin, les costó mucho trabajo des
Jesucristo no querian comer con los samaritanos. arraigar.
Joan. c. , y . 9. Les acusaban de crímen por comer Se hacian entre los judios dos clases de comida de
con los publicanos y pecadores. Mat. c. 9, y . 11. Se difunto: la 1.” inmediatamente despues de los fune
escandalizaron porque S. Pedro habia comido con los rales; los que asistian á ellos se tenian como mancha
incircuncisos. ¿ c. 11, y 3. No era su ley la que dos y obligados á purificarse, como si hubiesen tocado
les inspiraba esta aversion; al contrario, esta les man el cadáver. La 2." se daba al fin del duelo; Josefo,
daba y les decia: «Si en medio de vosotros se halla Guerra de los Judios, lib. 2, c. 1. La misma costum
un estranjero, no le desprecieis, no le maltrateis, bre reina aun en el dia entre las gentes rústicas en al
amadle y portaos con él como con un conciudada gunas provincias en que se han conservado las auti
no; vosotros tambien habeis sido estranjeros en guas costumbres. Todas las personas de la familia del
Egipto. - - •
que ha muerto, que han asistido á sus exequias, co
En cuanto á las comidas de los cristianos, dice el men juntas una comida frugal en la casa del difunto,
abad Fleury, iban siempre acompañadas de frugali la que se renueva al cabo de un año despues de su
dad y moderacion. Según la observacion de S. Cle aniversario.
mente de Alejandria, les estaba recomendado no vi
vir para comer, sino comer para vivir; no tomar mas Compañero... El que vive en la misma habi
alimento que el necesario para la salud y para tener tacion ó en el mismo cuarto. En los primeros siglos,
la fuerza necesaria para el trabajo; el renunciar á to para prevenir los obispos cualquier sospecha desven
das las viandas esquisitas, al aparato de las comidas tajosa en su conducta, llevaban consigo un eclesiástico
suntuosas y á todo lo que tuviese necesidad del arte ue les acompañaba á todas partes, que era testigo
culinario. toma literalmente aquella regla de San ¿ todas sus acciones y dormia en el mismo cuar—
Pablo: Es bueno no comer carne ni beber vino. Comian to; por esto se ha llamado Compañero del obispo. El
mas bien peces y aves que carne gorda, porque les patriarca de Constantinopla tenia muchos de estos
recia muy suculenta; pero siempre se abstenian de que se sucedian, y el primero se llamaba proto-con —
a sangre y de las carnes sofocadas, segun la decision pañero. Por la confianza que tenia en ellos el patriar
del concilio de los apóstoles, que se observó durante ca , por la parte que les daba en el gobierno, y el
muchos siglos. Muchos no vivian mas que de leche, crédito que adquirieron en la corte, bien pronto se
de frutas y legumbres; algunos se reducian á solo hizo de mucha consideracion, el destino de proto
yerbas con pan y agua. Como se apreciaba mucho, la compañero; era un título para llegar al patriarcado, lo
abstinencia de los pitagóricos y de algunos otros filó mismo que en Roma la dignidad de arcediano. Por
sofos, los cristianos se creian obligados á vivir al me esta razon se han visto algunas veces á los hijos y
nos como los mas sabios de los paganos. Su comida, hermanos de los emperadores ocupar este puesto, se
por sencilla y ligera que fuese, era precedida y segui bre todo desde el siglo IX; los mismos obispos y los
da de largas oraciones, de las que todavia ha que metropolitanos tenian mucho honor en estar adorna
dado una fórmula, y el poeta Prudencio ha compues dos de este carácter.
lo dos himnos sobre este asunto, en los que está bien Poco á poco los proto-compañeros, se consideraron
manifiesto el espíritu de aquellos primeros siglos. Iba como el primer personage despues de los patriarcas;
tambien acompañada de la lectura de la Sagrada Es. se creyeron superiores á los obispos y á los metropo
critura, de cánticos espirituales y de accion de gra litanos, y se ponian delante de ellos en las ceremo
cias en vez de las canciones profanas con que los pa nias eclesiásticas. Sus prerogativas, aunque mas li
ganos acompañaban sus festines, Costumbres de los mitadas, son muy grandes todavia. En el sínodo cº
cristianos, 10. ¿Cuál seria la admiracion de los lebrado en Constantinopla contra el patriarca Cirilo
rimeros fieles si fuesen testigos del lujo y de la pro Lucar, que queria estender en la iglesia griega los
usion que reinan en las comidas de los cristianos errores de Calvino, ¿
el proto-compañero la
del dia? segunda dignidad de la Iglesia de Constantinopla. En
COMIDAS DE CARIDAD. V. AGAPES. cuanto á los compañeros hace mucho tiempo que ya
no existen en Occidente, y que en Oriente no es mas
COMIDA DE DIFUNTO. Ceremonia fúnebre que ue un vano título, Zonaras, Annal. t. 3. Tomasino
usaban los antiguos hebreos y los demas pueblos; era ¿ ecclesiat. I. parte, l. 1, c. 6; III parte, l. 1,
costumbre hacer una comida sobre la tumba del que c. 151, IV parte, l. 1, c. 76.
se acababa de inhumar, ó en su casa despues de los
funerales. El profeta Barne dice de los paganos, c. 6, Compañia de Jesus. V. Jrsuitas.
}, 31: «Gritan en presencia de sus dioses, como en la
comida de un difunto.» Compasion. V. Miseal CoRDIA.
El uso de poner el alimento para los pobres en la
sepultura de los difuntos era tambien general entre COMPASION DE LA SANTISIMA VIRGEN. En
los hebreos. Tobias exhorta á su hijo á que ponga su muchas diócesis se hace el viernes de la semana de
¿ en la sepultura del justo, y á que no coma con Pasion el oficio de la Compasion de la santísima Vir
os pecadores. S. Agustin, Epist. 22, observa que en gen para honrar los dolores que debió sufrir la san-"
su tiempo, en Africa, se iba á comer á los sepulcros tísima Madre de Dios en vista de las ignominias, de
de los mártires y á los cementerios. Se hacia esto en los sufrimientos y de la muerte de su Hijo. Muchos
el principio inocentemente, pero despues se cayó en PP. de la Iglesia han hecho observar á los fieles el
 COM 447) COM
valor con que Maria asistió en el Calvario á la muer motivos de amor, ¿cómo no lloran los pecadores? Si
te del Salvador y á las últimas palabras que le diri las almas fieles é inocentes desean hacer resonar los
gió. Algunos críticos, poco instruidos en el genio de la desiertos con sus gemidos, ¿qué conducta deben tener
lengua hebrea y en las costumbres de los judios, han aquellas cuyos instantes van señalados por nuevas
creido hallar dureza en estas palabras: Muger, ve infidelidades? Mor. l. 23, c. 21.
a 1 º 4 tu hijo, Joan. c. 19, y. 26; pero se han en— De esta misma moral, enseñada y practicada por
gañado V. MUGER. todos los santos, deducen los incrédulos que la reli—
gion, lejos de consolar al hombre y dulcificar sus pe
Compeler V. PERSECUCIoN. nas, no sirve mas que para hacerlo mas desgraciado;
que lo vuelve triste y misántropo, que la religion 10
Completas. En la Iglesia romana son la última es mas que una fiebre melancólica. ¿Pero vemos á los
parte del oficio diario. Se componen de tres salmos incrédulos mas alegres, mas contentos, mas dichosos
con una sola antífona , de un himno, de una capítula que los devotos? En sus discursos y en sus escritos,
y de un responsorio breve, del cántico de Simeon, no vemos mas que quejas, murmuraciones, declama
Nunc dimittis, de una oracion, etc. Estan destinadas ciones y furores muchas veces. Uno se queja de los
á honrar la sepultura del Salvador, segun la glosa, caprichos de la fortuna, de la infidelidad de sus ami
c. 10 de celeb. Missar; pero se ignora el tiempo de su gos, de la envidia y malignidad de sus concurrentes,
inslitucion. de la indiferencia de sus protectores; otro de sus en—
El cardenal Bona, de psalmod. c. 10, prueba con fermedades personales, de sus disgustos domésticos,
tra Belarmino que no tenian lugar en la Iglesia pri de las desgracias de sus parientes, de las intrigas de
mitiva. No se halla en los antiguos ninguna señal de la sociedad. Aquel llora las plagas de la naturaleza,
completas. Terminaban su oficio en nona; segun san los vicios de la humanidad , la corrupcion de todos
Basilio, major regular. q.37, cantaban en ella el sal— los estados, las injurias hechas á la virtud : este los
mo 90, que en el dia se recita en completas. El autor defectos del gobierno, los errores de la política, la
de las Const. apostól. habla de un himno de la tarde, negligencia de los soberanos, la esclavitud de las na
y Casiano del oficio de la tarde que estaba en uso ciones, etc. Tal es el asunto ordinario de la mayor
entre los monges de Egipto; mas parece que debe parte de sus conversaciones. Si el hombre está con
mos entender por esto las vísperas. V. Bingham, An— denado á sufrir y á llorar, las lágrimas de compuncion
tiquit. eccles. tom. 5, l. 13, c. 9, S. 8. son preferibles á las de la incredulidad; las primeras
al menos nos dan esperanzas para el porvenir, las se
Comprension. Esta palabra significa en teo— gundas no nos dejan ninguna.
logía el estado de los bienaventurados que gozan de
la vision intuitiva de Dios; se les lla:ca comprensores Comunicacion de idiomas. Palabra con
en oposicion á los justos que viven en la tierra, que sagrada entre los teólogos, tratando del misterio de
llamamos viadores; esta palabra está tomada de san la Encarnacion, para espresar la aplicacion de los
Pablo. 1. Cor. c. 9, y. 24. atributos de las dos naturalezas unidas en Jesucristo á
su divina persona.
Compune on. Pesar de haber ofendido á Dios, En virtud de la union hipostática de las dos natu
que tambien se llama contricion. No es buena la con— ralezas en solo una persona divina, se atribuyen con
fesion si no va acompañada de un sincero arrepenti razon á esta persona todos los idiomas ó todas las pro
miento y de la compuncion de corazon. piedades de la naturaleza humana, que no son incom
En la vida espiritual, compuncion significa tambien patibles con la divinidad. Asi decimos que Dios pa
un piadoso sentimiento de dolor, que tiene por causa deció, que Dios murió, etc. Cosas que en rigor no
las miserias de la vida, los peligros del mundo, la convienen mas que á la naturaleza humana; esto sig
multitud de los que se pierden, etc. nifica que Dios padeció en cuanto á su humanidad,
Jesucristo dijo: «Bienaventurados los que lloran, que murió en cuanto hombre, porque segun el axioma
¿ ellos serán consolados.» Estas palabras han recibido en teología, las denominaciones que signifi
echo á los santos encontrar dulzuras, aun en las lá— can las naturalezas ó las propiedades de la naturale
grimas de la penitencia. La caridad, dice S. Grego za recaen sobre el supuesto ó sobre la persona.
rio, nuestro apartamiento de Dios, nuestras faltas Asi como no hay en Jesucristo mas que una sola
pasadas, las que cometemos todos los dias, el peso de persona, que es la persona del Verbo, á ella es á
nuestras miserias y de las del prójimo, nos escitaná llo. quien se deben atribuir las denominaciones de las dos
rar continuamente, al menos en el deseo del corazon, naturalezas y de sus propiedades. Pero por la comu—
si de otro modo no podemos hacerlo. Todo lo que nos nicacion de idiomas no se puede atribuir á Jesu
rodea nos presta un motivo de lágrimas; y las debe cristo lo que es incompatible con la divinidad, lo que
mos aun mezclar con las súplicas y con los cánticos haria suponer que no es Dios; esto seria destruir la
que Dios nos inspira. En vista de la ingratitud con union hipostática, que es el fundamento de la comu
que hemos pagado los beneficios del Señor, ¿podemos nicacion de idiomas Asi no se puede decir que Je
tener un acto de caridad sin hallarnos penetrados por sucristo es un puro hombre, que es falible, capaz de
un amargo dolor? ¿No debemos antes de cantar sus pecar, etc. Por la misma razon se dice¿ Jesucristo
alabanzas, lavar nuestras almas con las lágrimas de es la sabiduría eterna, que es lodopoderoso, etc.,
la compuncion, y purificarlas con la sangre del Cor— atributos propios de la divinidad, porque la persona
dero sin mancha, que murió por la salud de los hom de Jesucristo es el Verbo divino.
bres? Los mayores santos lloran continuamente por Los nestorianos no admitian la comunicacion de idio
 COM k8) COM
mas; no podian sufrir que se dijese, hablando de Je— dadano, es como si se dijese que un padre no puede
sucristo, que Dios ha padecido, que ha muerto, que estar unido al bien particular de su familia sin apar
María es madre de Dios; de lo que se dedujo que ad tarse del bien público; que el patriotismo ó el espíritu
milian dos personas en Jesucriso, aunque no lo afir nacional es contrario á la humanidad o á la afeccion
masen espresamente. Los luteranos cayeron en el es general que debemos tener por todos los hombres.
ceso opuesto llevando muy allá la comunicacion de Destruyendo el espíritu de cuerpo le sustituye el
idiomas, pretendiendo que Jesucristo, no solo en cuan egoismo, carácter tan pernicioso y opuesto al interés
to Dios sino en cuanto hombre, es inmortal, inmen— general como al espíritu del cristianismo, que es un
so, presente en todas partes; propiedades que en nin espíritu de caridad y fraternidad. La pretendida hu
gun sentido pueden convenir á la humanidad. Véase manidad de nuestros filósofos cosmopolilas no es mas
EN CARNACION. -
que una máscara de hipocresia bajo la que ocultan su
egoismo. Cualquiera que no sabe significar la amistad
Communicantes. Secta de anabaptistas. Se lla á las personas con las que vive todos los dias por su
maron asi por la comunidad de las mugeres y de los compiacencia, su dulzura, sus servicios en el fondo no
niños que habian establecido entre sí, á ejemplo de ama mas que á sí mismo. Con bellas máximas de
los nicolaitas. Sandero, Haeres. 198; Gauthier, en su afeccion géneral por el género humano, no querria
Cronologia del siglo XVI. V. ANADAprisTAs. inco nodarse en nada para consolar un aligido, so
correr un enfermo, aliviar un pobre, sufrir un carác
«Jomsunidad eclesiástica. Cuerpo compues ter enfadoso. Al contrario, el que en una sociedad par
to de personas eclesiásticas que viven en comun y tie— ticular como una comunidad eclesiástica ó religiosa,
nen los mismos intereses. Estas comudidades son se— se acostumbra desde luego á contemplar, á sufrir, á
culares ó regulares. Estas son los capítulos de los servir á sus hermanos, está tanto mas dispuesto á tra
canónigos regulares, los monasterios de religiosos, los tar lo mismo á todos los hombres: asi, lo que se llama
espíritu de cuerpo no es en el fondo mas que el amor
conventos de religiosas. Los que los componen viven
juntos, observan una misma regla y no poseen nada del bien general fortificado por el hábito de contri
prop10. buir á él. -

Las comunidades seculares son las congregaciones Un protestante mas juicioso que nuestros censores
de sacerdotes, los colegios, los seminarios y otras ca políticos, ha reconocido la utilidad de las comunidades
sas compuestas de eclesiásticos que no hacen votos ni en general; no podemos privarnos de copiar sus mác
estan sujetos á una regla particular. Su origen se atri simas. «Los trabajos, dice, que exigen tiempo y fati
buye á S. Agustin ; formó una comunidad de clérigos gas, son siempre mejor ejecutados por hombres que
en su ciudad episcopal, en la que vivian y comian obran en comun, que cuando trabajan separados. Hay
con su obispo, eran todos alimentados y vestidos á mas designio, mas constancia en seguir el mismo plan,
espensas de la comunidad, usaban muebles y vesti— mas fuerza en vencer los obstáculos y mas economia.
dos comunes, sin hacerse notar por ninguna singu Hay empresas que no pueden ejecutarse mas que por
laridad. Renunciaban á todo lo que tenian propio; un cuerpo, o por una sociedad que vive bajo la misma
pero no hacian voto de continencia sino cuando re regla.... Asi, me cuesta trabajo el creer que ninguna
cibian las órdenes á las las que va unido este voto. colonia pueda llegar al mismo grado de prosperidad
Estas comunidades eclesiásticas que se multiplica— que un convento..... -

ron en el Occidente, han servido de modelo á los ca— «La esperiencia prueba que las sociedades pura
nónigos regulares que se honran todos con llevar el mente civiles se descuidan, y las negligencias aper
nombre de S. Agustin. En España habia muchas de cibidas no producen mas que inquietudes, agilaciones,
estas comunidades, en las que se formaban jóvenes cambios perpéluos de planes..... Pero hay otra clase
clérigos para las letras y la piedad, como se ve por de sociedades en las que todo está reducido á un in
el segundo concilio de Toledo; han sido reemplazadas terés comun, y en las que se observan mejor las re
por los seminarios. glas: estas son las sociedades religiosas. De esto resul
La historia eclesiástica hace tambien mencion de ta que han prosperado mas que las otras en los esla
comunidades que eran eclesiásticas y monásticas al blecimientos que han emprendido.... Sin esactitud
misio tiempo: lales eran los monasterios de S. Ful— en seguir una regla los mayores recursos son inefi
gencio, obispo de Ruspa en Africa, y el de S. Grego caces, sus efectos se malogran y no tienden al hien
rio Magno. C0) tl In. -

Se llaman en el dia comunidades eclesiásticas todasLa naturaleza misma de estas sociedades impide
aquellas que no pertenecen á ningun orden ó congre— que puedan ser muy numerosas, su esceso las daña y
gacion establecida por cartas patentes. Las hay de las reduce. Pero se pueden sacar de ellas grandes lec
¿ ó viudas que no hacen votos, al menos so— ciones para el acierto y el bien de la sociedad gene
ennes, y que tienen una vida muy regular. ral, y no puedo menos de considerarlas en sí mismas
La utilidad de estas diversas clases de comunida— comó un bien. Si nos remontamos al origen de la ma
des es que hacen subsistir á un gran número de per yor parte de los monaste los rústicos, encontraremos
sonas con poco gasto, sostenerles en la piedad con el probablemente que sus primeros habitantes han sido
ausilio del ejemplo, desterrar el lujo qie todo lo ab trabajadores en el desierto, á ellos á su buena conduc
Sorve en la sociedad civil; estos son ordinariaraente ta y la de sus sucesores son deudores los conventos de
modelos de buen orden y de sabia economia. Cuando los bienes de que gozan: ¿y por qué no han de gozarlos?
se dice que el espíritu de cuerpo que reina en ellas es Imitémoslessin serles envidiosos. Si sus posesiones per
contrario al interes público y al carácter de buen ciu tenecian á algun señor, esto no escitaria ninguna que
 COM k 9) COM
ja ni daria lugar á ninguna sátira. ¿Por qué no su— de los funestos efectos que ha producido la filosofia de
cede lo mismo con respecto á los conventos? Yo veo nuestro siglo; penetra en todas partes, infecta todos
estos establecimientos con tanto mas placer, en cuan los estados, y hace sentir su influencia en los mismos
lo que no es solo el goce de un hombre sino de mu lugares destinados para preservarse de ella
chos, y bajo este punto de visla no podré desearles Añadamos que hay trabajos literarios que no han
mas que mucha felicidad. Los religiosos son hombres podido ejecutarse bien sino por las comunidades; ne—
y se debe desear que todo hombre sea feliz en su es cesitaban una rica biblioteca, correspondencia con
lado, no destruyendo la felicidad de los demas........ otros sabios y muchos cooperadores que trabajasen
Asi, no veo en qué los religiosos usurpan la felicidad de concierto. Tales son las colecciones de monumen
de los demas hombres; pero veo que en su estado tie
los antiguos, las hermosas ediciones de los PP., los
nen mucho de esa dicha tranquila que es adoptada grandes cuerpos de historia dados á luz por los be
por un gran número de hombres. La simple subsis— nedictinos. Un escritor en el claustro, libre de to
tencia, pero abundante, se halla asegurada alli para dos los cuidados domésticos y de todas las distrac—
los padres, los hermanos, los criados y los trabajado ciones de la sociedad, acostumbrado á una vida uni
res. La regla se estiende á todo, á todo provee, pre forme y cuyos momentos son contados, tiene mucho
viene los estravios y los desórdenes. Pueden mante— mas tiempo para entregarse al estudio que los que
nerse en un estado de honesla abundancia, porque viven en el mundo; aqui tambien es donde los mo—
hacen producir mas á la tierra, y nada se disipa. El tivos de religion son muy necesarios para animar al
poder de los gefes mantiene entre ellos la regla, y se trabajo.
ria de desear, para la felicidad de los hombres, que
sucediese lo mismo en todas pares. Por último, hay servicios esenciales que no pue
«Sin el lazo saludable de la religion se intentaria den prestarse constantemente al público mas que por
en vano formar semejantes sociedades; las que no se las comunidades, tales son el cuidado de los hospi—
formasen mas que por convenio, no durarian mucho tales y de los establecimientos de caridad, la edu—
tiempo. El hombre es muy inconstante para sujetar cacion de la juventud, las misiones, etc. Es necesario
lener ¿ de antemano que esten siempre pron.
se á la regla cuando puede quebrantarla impunemen
te; asi es necesario que en el recinto que se debe ob— los á reemplazar á los que falten. Véase MoNGEs, Mo—
NASTERIOS.
servar la regla, todo esté sometido á ella. Solo la re
ligion, sea por su fuerza natural ó por el peso de la Consmunidad de bienes. Se dice en las Actas
opinion la, puede producir este feliz resultado.
El que en el claustro pudiera violar la regla, está de los apóstoles, c. 2, , que los primeros cristianos
contenido por la sociedad entera, porque tiene nece— de Jerusalen ponian sus bienes en comun, y que los
sidad de la consideracion pública para elevar la me pobres vivian á espensas de los ricos; pero no duró
dianía de su estado. mucho tiempo esta disciplina, y no hay nada que
«Estoy admirado de que los protestantes hayan ruebe el que fuese imitada por las demas iglesias.
conservado los claustros en Alemania, y quisiera ver º incrédulos han sostenido sin razon que la comu
estos establecimientos en todas partes, porque en to nidad de bienes habia contribuido mucho á la propa
das partes veo una clase de gentes que tiene necesi— gacion del cristianismo. Aun cuando esto hubiese si
dad de una mediana suerte segura que la opinion pú do un incentivo para los pobres, hubiera sido un obs—
blica revela, pero que por su inaccion y falta de re táculo para los ricos; si no hubiese habido en Jerusa
cursos es un gran peso para ella y para la sociedad. len un gran número de ricos que habian abrazado la
Es necesario, en una palabra, hospitales honestos, y fé, no se hubieran hallado en éstado de alimentar los
no son otra cosa los conventos. pobres. -

«Seria facil corregir los defectos y reformar los Por otro lado, Mosheim en sus disertaciones sobre la
abusos de los que merecen censura; pero se les ataca historia eclesiástica, ha hecho una en la que nos pa
no solo por los abusos, sino en sí mismos, y por rece que ha probado con bastante solidez que esta co
principios que no pueden producir mas que males: munidad de bienes entre los primeros fieles de Jerusa
len no debe enlenderse rigorosamente, sino en el
se estravia á los hombres creyendo hablarles el len mismo
guage de la humanidad.» Cartas sobre la historia de no tienesentido que se dice de un hombre liberal que
la tierra y del hombre, por M. Deluc, t. 4. p. 72 y nada suyo, y que entre amigos todos los bie
siguientes. nes son comunes. Así eslas palabras de S. Lucas, Act.
Las reflexiones de este sábio observador sobre la c. 2, y . , y c., y. 32 «la multitud de fieles no
utilidad temporal y política de las comunidades no tenia mas que un corazon y una alma; ninguno mi
son menos ciertas en cuanto á su utilidad moral; la raba como suyo lo que poseia, sino que todo era co
regla es todavia mas necesaria para dirigir la con mun entre ellos», significan únicamente que cada fiel
ducta de los hombres en la obra de su salvacion, que estaba siempre pronto á despojarse de lo que poseia
en los trabajos de la sociedad. En general, siempre para socorrerá los pobres; muchos, en efecto, vendian
han sido mas puras las costumbres, y mas sostenida una parte de sus bienes para dar limosna.
la piedad en los monasterios que en cualquiera otra Desde luego es cierto que los apóstoles no obligaban
parte. Cuando en ellos ha habido desórdenes, es una á nadie á hacer este sacrificio. Cuando Ananias y Sa
prueba que las costumbres públicas se hallan enton - fira vendieron el campo, y llevaron una parte del pre
ces en el mas alto grado de corrupcion, y que no se cio á los pies de los apóstoles para distribuirlo en li
respeta ya á la virtud en el mundo. Si en el dia es mosnas, S. Pedro les dijo: «¿No érais dueños de guar
mas rara en el claustro que antiguamente, es un0 dar vuestro campo ó de retener su precio despues de
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haberlo vendido?» c. 5, y... Este modo de ejercer la se habian separado de la Iglesia católica. La incons
caridad era absolutamente libre. tancia natural del entendimiento humano, el orgullo
Hácia fines del primer siglo S. Bernabé; en el se que se lisonjea pensar mejor que los demas, la ambi
gundo S. Justino y Luciano; en el tercero S. Cle cion de ser gefe de ¿ son enfermedades que du
mente de Alejandria, Tertuliano, Orígenes, y S.Ci ran tanto como la humanidad; no hay otro remedio
riano; en el cuarto Arnobio y Lactancio dicen tam contra sus estragos que un freno que las retenga, y
ien que entre los cristianos todos los bienes son comu que las obligue á sujetarse bajo el yugo de la enseñan
nes; ciertamente que no se trataba ya de una comu za universal. V. IGLEsIA, S. 2. -

nidad de bienes tomada rigorosamente. COMUNION DE LOS SANTOS. Es la union entre

Con esto se hallan refutadas las vanas congeluras la Iglesia triunfante, la Iglesia militante y la Iglesia
de algunos deistas, que han dicho que los fieles de paciente; es decir, entre los santos que estan en el
Jerusalen no hicieron mas que imitar á los pitagóri cielo, las almas que sufren en el purgatorio, y los fie
cos y los esenios que ponian sus bienes en comun; que les que viven en la tierra. Estas tres partes de una y
el mismo Jesucristo habia tomado de estos su doctri sola Iglesia forman un cuerpo, cuya cabeza invisible es
na, su moral, y que habia establecido entre sus dis Jesucristo. El papa, vicario de Jesucristo, es su cabe
cípulos la misma disciplina que habia visto en uso en za visible, y los miembros estan unidos entre sí con
esta secta judia, etc. los vínculos de la caridad con una mútua comunica—
No hay duda que la caridad heróica y tan comun cion de intercesion y oraciones. De aqui la invocacion
en los primeros cristianos ha contribuido mucho á la de los santos, las oraciones por los difuntos, y la con—
propagacion del cristianismo; sus mismos enemigos fianza en el poder de los bienaventurados a rededor
han dado testimonio de ella, lo mismo que los PP. de del trono de Dios.
la Iglesia. Pero los incrédulos quieren hacerse ilu La comunion de los santos es un dogma de fé, uno
sion cuando presentan esta virtud como una causa de los artículos del símbolo de los apóstoles, recono
enteramente natural del establecimiento de nuestra cido constantemente por la tradicion y fundado en
religion: ¿es natural que el desprendimiento y el des la Sagrada Escritura. «Todos (dice San Pablo) somos
recio de los bienes ¿ este mundo, tan raros entre un solo cuerpo, y miembros uno de otro». Romanos
os paganos y los judios, se hayan hecho de repente c. 12, y.5. «Que no haya division en este cuerpo,
una cualidad común y popular entre los cristianos? sino que sus miembros cuiden unos de otros». I. Cor.
V. CARIDAD. c. 12, y.25 «Crezcamos todos en verdad y en cari
dad y en Jesucristo, que es nuestra cabeza». Ephes.,
Comunion de fé. Creencia uniforme de mu c., y. 15, etc.
chas personas, que las une bajo un solo gefe en una De esto deducimos que todo es comun en la Igle
misma lglesia; sin este carácter, la Iglesia no puede sia, oraciones, buenas obras, gracias, méritos, etc.;
tener una verdadera unidad. Tal ha sido la persua una de las mayores desgracias de un cristiano es la
sion de sus miembrós desde los primeros siglos; la de hallarse privado de la comunion de los santos por
vemos por los cánones del concilio de Elvira, celebra la escomunion y por el cisma que en algun modo es
do hácia el año 300; asi es como lo ha entendido siem renunciará ella, despreciar el culto público, y prefe
pre el símbolo de Nicea, que llama á la Iglesia una, rir por molicie un ¿ doméstico y particular.
santa, católica y apostólica. Por consiguiente, todas las Cualquier fiel que se conoce á sí mismo se hace
sectas, que han dejado de estar en comunion de fé con justicia, no cuenta con confianza en sus virtudes ni
ella, han cesado de ser miembros de la lglesia de Je en sus buenas obras, sino que descansa en la inter
sucristo. El soberano pontífice es el gefe de la comu cesion, en las oraciones y los méritos de la Iglesia
nion católica, la Iglesia de Roma, 6 la Santa Sede es que son los de Jesucristo, de quien tienen todo su va
su centro: no podemos separarnos de ella sin ser cis lor. Esto es lo que sostiene la esperanza cristiana y
máticos. nos escita á obrar bien.
Jesucristo, hablando de sus ovejas, dijo que haria de Este mismo dogma de la comunion de los santos
ellas un solo rebaño bajo un solo pastor, Joan. c. 10, debe todavia contribuir á nnir los corazones, á sofo—
y. 16. S. Pablo repite contínuamente á los fieles que car los resentimientos generales y particulares, á
son un solo cuerpo. Rom. c. 12, y.5; 1. Cor. c. 12, inspirar á todos los cristianos sentimientos de frater
y. 25. Esto no puede será menos que todos tengan nidad. «En Jesucristo, dice S. Pablo, no hay ni judio,
una misma fé, los mismos sacramentos, la misma ni gentil, ni griego, ni bárbaro, ni señor, ni esclavo;
moral, el mismo culto; de otro modo la unidad no se en él sois un mismo cuerpo y una sola familia.» Gá
ria mas que esterior y aparente. Para que sea real y latas, c. 3, y . 28. Tal ha sido la intencion de nuestro
constante, es tan necesario un centro de subordina divino Maestro; si muchas veces no correspondemos
cion, como una bandera ó una insignia para reunir á ella, no es culpa de nuestra religion.
los soldados. En los primeros siglos estaba en uso en las dife
La evidencia de este principio está confirmada por rentes iglesias escribirse mútuamente cartas de fra
una esperiencia de diez y siete siglos. Todos los que no ternidad y de amistad, que se llamaban cartas de co
han querido someterse á esta constitucion de la Iglesia, munion. Demostraban por este medio que estaban
se han separado para formar bandera aparte; y bien unidas unas entre otras, no solo por los lazos de una
pronto esta primera secta se ha subdividido en otras misma fé y de un mismo culto, sino tambien por una
muchas, que no han tenido entre sí ningun lazo con caridad mútua; que las unas se interesaban en la pros
el tronco de que se habian separado. Se han abor peridad de las otras, y tomaban parte en el mal ó en
recido y condenado mútuamente, como ellas mismas el bien que podia sucederles. -
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S. Pablo llama tambien comunion á los auxilios instruccion que podia hacer igualmente en cada co
mútuos de limosnas y de servicios que los fieles se mida familiar, ó al menos en la que muchas familias
hacian unos á otros: Beneficentiae et communionis no se hallan reunidas.
lite oblivisci. Heb., c. 13, y . 16. En algunos documen S. Clemente en el primer siglo de la Iglesia, san
tos del siglo XIII se ha dado el nombre de comunion Ignacio y san Justino en el segundo; en el tercero Ter
á las ofrendas que hacian los fieles en comun. tuliano y otros nos enseñan con qué pureza, qué res
COMUNION EUUARISTICA O SACRAMENTAL. peto, qué fervor, los primeros fieles hacian esta santa
Es la accion de recibir en el sacramento de la Euca accion, y lo que pensaban de ella. En todas las litur
ristía el cuerpo y sangre de Jesucristo, accion que ias las oraciones que preceden á la comunion, la
evidentemente es la mas augusta y la mas santa de órmula de que va acompañada, la adoracion de la
nuestra religion. ¿El cáliz que bendecimos, dice san Eucaristía, el modo como se la recibia, la accion de
Pablo, no es la comunion la sangre de Jesucristo, gracias que le sigue, demueslran que siempre los fie
y el pan que partimos no es la participacion del cuerpo les han creido recibir en ella, no un simple símbolo
de Jesucristo? Somos todos un solo pan y un solo del cuerpo y de la sangre de Jesucristo, sino la rea
cuerpo, los que participamos del mismo pan y del lidad y la sustancia de estos dones divinos. Nuestros
mismo cáliz.» 1 Cor., c. 10. Asi nos hace conocer el controversistas han puesto este punto de hecho y de
Apóstol toda la energía de la palabra comunion. doctrina en un grado de evidencia al que no se puede
Ha sido un uso constante en todas las religiones el resistir. V. Perpetuidad de la fé, t. l. 3, c. 1 y
comer en comun las carnes de la víctima que se habia sig. No concebimos cómo Bingham, á pesar de sus
ofrecido en sacrificio; desde los primeros tiempos el preocupaciones anglicanas, no lo ha conocido refi
adre de familias presidia esta ceremonia, reunia sus riendo los monumentos de la antigüedad sobre este
sus criados, y muchas veces á los estraños para punto. Orig. eccles., l. 15, c. 3.
barticipar de esta comida fraternal. Los paganos se No ha sido mas juicioso Basnage. Del modo como
¿n en esta ocasion de comer con los dioses; se comulgaba en los primeros siglos pretende sacar
los adoradores del verdadero Dios, mas sensatos, se inducciones para probar que no se creia entonces la
consideraban como sentados á la mesa del Padre co presencia real de Jesucristo en la Eucaristía, ni la
mun de todas las criaturas. -
iransustanciacion. Observa que no se recibia siem—
Jesucristo, que tan bien conocia los resortes que pre en ayunas, se daba á los niños inmediata
mueven el corazon humano, y la influencia ¿ mente despues del bautismo, y se creia que estos dos
ceremonias tienen sobre las costumbres, no podia de sacramentos les eran igualmente necesarios. Los
jar de conservar una tan tierna como esta; pero se ha adultos la recibian en sus manos, se les permitia lle
quilado de ella lo que los antiguos sacrificios tenian varla á su casa; algunas veces se ponia en la boca de
de muy grosero. - los muertos y se la enterraba con ellos. Algunos obis
Es muy fria cuando no se la considera mas que pos la llevaban en cestas de mimbre y en cálices de
como un simple símbolo destinado á recordarnos la madera ó de vidrio. No solo la distribuian los diáconos
memoria de la última cena de Jesucrist0; una comida sino que podian consagrarla; no se reservaba nada
ordinaria haria en nosotros mas impresion. Pero, ¡qué para los enfermos, ni para los moribundos. La mayor
tierna es la comunion cuando se cree que este divino parte de estos usos se considerarian en el dia como
Salvador es á la vez el sacerdote, la víctima y el ali crímenes; sin duda que no se habria pensado asi en
mento de sus adoradores! los primeros siglos, si se hubiera tenido entonces la
La comunion de fé y la comunion de los santos son misma idea de la Eucaristía que ha formado la Igle
una consecuencia de la comunion sacramental, que es sia romana en la continuacion de los primeros siglos.
su señal. «Somos un solo cuerpo, dice san Pablo, to Historia de la Iglesia, l. 14, c. 9. Daillé habia ya he
dos los que participamos de un mismo pan.» 1 Cor., cho poco mas ó menos las mismas observaciones.
c. 10, y. 17. Pero esplica la naturaleza de este pan Nos parece que las unas no prueban nada, y que
diciendo, que es la participacion del cuerpo del Señor. las otras dan lugar á consecuencias directamente
Confirma esta idea comparando los cristianos á los opuestas á las que sacan los protestantes.
israelitas que participaban del sacrificio comiendo la 1. No es sorprendente que durante las persecu—
carne de la víctima. Si la Eucaristía no es un verdade ciones hayan sido obligados muchas veces á celebrar
ro sacrificio, la comparacion es falsa, la participacion los santos misterios durante la noche, y que los fieles
imaginaria; la carne de las víctimas era una imágen se hayan visto en la imposibilidad de comulgar
mucho mas sensible del cuerpo de Jesucristo muerto en ayunas; la disposicion que se ha creido siem
en la cruz, que el pan y el vino. pre mas necesaria para esta accion santa es la pu
No debemos, pues, admirarnos de que los protes reza del alma; en caso de necesidad absoluta pueden
tantes, haciendo de la Eucaristía un signo sin reali dispensarse las demas. Se ha alabado á S. Exupero,
dad, hayan renunciado al mismo tiempo á la eficacia obispo de Tolosa, que despue8 de haberlo dado todo
de la comunion sacramental, á la comunion de la fé, á los pobres se vió reducido á llevar la Eucaristía en
á la comunion de los santos. Cada individuo en su una cesla de mimbres y en una copa de vidrio. ¿Se
amilia puede consagrar la Eucaristía y hacer la co deduce de esto que en todas partes hiciesen lo mismo?
munion en el sentido que dan á esta palabra; no es Esto era durante la irrupcion de los godos y de
necesario sacerdote, ni altar, ni ceremonias; con una los demas bárbaros; los pueblos estaban entonces re
fé calvinista y un poco de entusiasmo toda la familia ducidos á una miseria estrema; se alabaria todavia
comulga en cada comida. Si esto fuese asi, fuera de al obispo que imitase á S. Exupero en semejante ca
propósito dedujo san Pablo de la cena eucaristica una so. En los paises en que no está tolerada la profesion
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del catolicismo, los sacerdotes se ven obligados á lle un punto de disputa entre los católicos y los protes
var á los enfermos la comunion en su bolsillo y sin tantes el saber si para esperimentar los efectos de la
ningun aparato esterior; por esto no se cree faltar al Eucaristia, es absolutamente necesario recibir las dos
respeto al sacramento. - especies, ó si se viola el mandamiento de Jesucristo
2." . Los primeros cristianos espuestos todos los comulgando solamente bajo la especie de pan, como
dias al martirio se llevaban á su casa la Eucaristia, á pretenden los protestantes.
fin de tomar con la santa comunion el valor que ne La solucion de esta cuestion depende mucho del
cesitaban para sufrir los tormentos; prueba que no sentir acerca de la Eucaristia. La Iglesia católica, que
pensaban como los protestantes, que esta accion no sostiene que Jesucristo está realmente presente bajo
es mas que la figura de la última cena de Jesucristo y cada una de las especies eucarísticas, y que en el es
que la comunion hecha en particular no es de ningun tado de inmortalidad de que goza su cuerpo y su san—
mérito: no han hecho lo mismo los pretendidos már gre no pueden ya separarse realmente, deduce con—
tires de los prolestantes porque no tenian acerca de la siguientemente que se recibe áJesucristo entero co
Eucaristia la misma creencia que los primeros fieles. mulgando bajo una sola especie y tan perfeclamente
3.° Si se hubiese creido entonces como los protes como si se recibiesen las dos. Al contrario, los cal
tantes que no se participa del cuerpo de Jesucristo vinistas que piensan que la Eucaristia es solo un sím
mas que por la fé, ¿se hubiera Juidado de dar la Eu bolo, una figura, una prenda del cuerpo y de la san—
caristia á los niños que noson capaces de tener esta fé? re de Jesucristo que se recibe espiritualmente por
no entraremos en la cuestion de saber si es cierto que a fé, sostienen que es un crímen dividir este símbolo,
S. Agustin y otros PP. han pensado que la Eucarís y que es alterar su significacion, por consecuencia
tia era tan necesaria á los niños como el bautismo, quitarle todo su efecto. Si fuese cierto el ¿º
y si la costumbre de dársela era tan general como pre sobre que razonan la consecuencia estaria bien de
tende Basnage; aunqueesto fuese inconstelable, siem— ducida, pero este principio es un error.
pre se deduciria de ello que la creencia de la Iglesia Es necesario convenir que la disciplina de la Igle
en aquellos tiempos era muy diferente de la de los sia ha variado en este punto: antiguamente los fieles
calvimistas, y que no pensaban como ellos, que solo han comulgado ordinariamcnte bajo las dos especies,
la fé constituye toda la eficacia de los sacramentos. y este uso ha subsistido mucho tiempo. Pero no es
El abuso prohibido por algunos concilios de poner menos cierto que en muchos casos no se ha comulgado
la Eucaristia en la boca de los muertos habria podido mas que bajó una especie, que la Iglesia no ha
introducirse menos si se hubiese participado de la creido nunca que esta comunion fuese criminal ó abu
opinion de los protestantes; pero esta misma prohibi siva, contraria á la intencion de Jesucristo, me
cion no prueba que este uso abusivo haya sido tan nos elicaz que la otra. San Justino nos enseña que
frecuente como Basnage quiere persuadirlo. a en el siglo II estaba en uso el llevar la comunion
...º ¿Cómo puede sostener que no se reservaba la i los ausentes, no hay ninguna prueba de que se ha
Eucaristia para los enfermos y para los moribundos, ya llevado siempre bajo las dos especies: esto hubie—
mientras que confiesa que se permitia á los penitentes ra sido muy dificil en tiempo de persecucion. Ben
recibirla en la hora de la muerte? ¿Estaba pues re— pronto se introdujo el uso de dar la Eucaristia á los
servada para ellos solos? Hé aqui lo que hubiera sido niños inmediatamente despues del bautismo; no po—
necesario probar. dian recibirla mas que bajo la especie de vino. San
En la palabra DIACONo demostraremos que es falso Cyp., l. de Lapsis. p. 189. Tertuliano y S.Cipriano
ue los diáconos hayan tenido el derecho ó el poder atestiguan que en el siglo III se llevaba la comu
consagrar la Eucaristia. nion á los enfermos en peligro de muerte, y á los
Entre los incrédulos unos han acusado á los católi confesores detenidos en las cárceles; que los fieles re—
cos de no creer en su religion, puesto que la comu— cibian la Eucaristía en sus manos, la llevaban á su
nion produce en ellos tan pocos efectos, oiros han vo— casa, la conservaban para comulgar ellos mismos si
mitado contra el dogma de la Eucaristia sarcasmos se hallaban espuestos al martirio á algun otro peligro;
groseros que solo la decencia debia haberlos prohibi no la tomaban mas que bajo la especie de pan, Ter
do. Tal es la injusticia de nuestros censores; vitupe tuliano l. 2, aduacor., c. 5. En ningun tiempo se ha ne
ran igualmente á los santos á quienes una fé viva pa . gado la comunion á los absteinios, á los que tenian
rece despojar de todas las afecciones terrestres, á los una repugnancia natural hicia el vino, Bingham, aun
cristianos imperfectos que no tienen el valor de vivir que persuadido de la comunion bajo las dos especies
de un modo conforme á su creencia. ¿Qué seria nece ha convenido en todos estos hechos. Orígen. ecles., li
sario para satisfacerlos? ¿Si es dificil ser virtuoso aun bro 15, c. . Cómo ha podido acusar de crímen á la
cuando se lenga la fé, lo seremos mas facilmente Iglesia romana por el uso en que está hace mas de
cuando no creamos nada? Su ejemplo no es apropósi cinco siglos de no dar á los fieles la comunion mas
to para persuadírnoslo. que bajo la especie de pan?
OMUNIONESPIRITUAL. Se llama asi en la Igle Basñage, mis aferrado, no ha sido de tan buena fé,
sia católica el deseo de recibir la Sagrada Eucaristia ha suprimido los hechos de que acabamos de hablar.
y los sentimientos de fervor por los que un fiel se es— Hist. de la Iglesia, l. 27, c. 11. Dice que la hglesia
cita él mismo á hacerse digno de ella. Es una práctica ha comulgado bajo las dos especies hasta el siglo
escelente de piedad hacer la comunion espiritual IX; que todo el mundo siempre ha comulgado asi.
siempre que se asiste á la santa misa. Esto es una impostura. Ademas de los ejemplos con
COMUNION BAJO LAS DOS ESPECIES; es de trarios que acabamos de citar, Orígenes en el siglo III
cir, bajo la especie de pan y la de vino. Ha sido habla de la comunion bajo la especie de pan, sin ha
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cer mercion la de vino. Contra Celso, l. 8, n. 33. reprimir la te meridad de los se clarios. Este cambio
Eusebio, Hist. eccles. l. 6, n. '', refiere la historia de disciplina, lejos de probar variacion en la creencia,
de un viejo moribundo, que comulgó con el pan con— atestigma, al contrario, su uniformidad.
sagrado y humedecido en agua. En el V los ma— Beausobre, Hist. del Maniq., t. 2, l. 9. c. 7, S.
niqueos por supersticion se abstenian de recibir la , ha querido sacar partido de lo que S. Leon y Ge—
comunion bajo la especie de vino. S. Leon, serm. de lasio han dicho de los maniqueos. Se deduce , dice:
Cuadrag. c. 5, es el que escilo al papa Gelasio á dar 1.º que en el siglo V no era permitido al sacerdote,
un decreto que mandaba á todos los fieles comulgar dar de comulgar á los fieles bajo una sola especie, ni á
bajo las dos especies. Como ha subsistido el tmani— estos el recibir mas que una , porque si el uso de una
quºismo en Occidente hasta cerca del siglo XII, no sola especie hubiera estado permitido, la denegacion
es sorprendente que hasta entonces se haya recibido que hacían los maniqueos de recibir el vino consa
ordinarianente la Eucaristía de ese modo: hé aqui grado no hubiera podido servir para hacerlos reco
lo que Basnage no ha tenido cuidado de observar. nocer, como dice S. Leon. 2 º Gelasio dice que y a
Pero antes del decreto de Ge'asio tenian libertad los que algunos se abstienen del caliz por no se qué su
fieles para no comulgar mas que bajo una especie. En persticion, los fieles deben recibir el sacramento to—
el siglo VI, el año 566, el 2.” concilio de Tours, do entero, ser privados de él enteramente, porque la
can. 3, man ló que el cuerpo de Nuestro Señor se dicision de uno y solo misterio no se puede hacer sin un
guardase, no entre las imagenes, sino debajo de la gran sacrilegio. Esto no es ya lo que pensa la glesia
cruz del allar ¿para qué lo habian de guardar sino romana. 3." Es necesario que la doctrina de Gelasio
para darlo en viático á los enfermosº y no se guardaba se haya creido todavia en el siglo XII, cuando Gra
alli el vino consagrado. En el VII el 11.º concilio ciano hizo la coleccion de su decreto, de otro modo
de Toledo, celebrado el año 675, can. 11, habla de este monge no se hubiera atrevido á insertar en él
los enfermos que no podian por la sequedad de su pa el canon de Gelasio. ..." Segun su parecer, los mani
ladar tragar la Eucaristia sin beber el caliz del Señor; queos, que en lugar de vino consagraban la Eucaris
luego fuera de este caso no se les daba mas que la es— tia con agua, obraban menos mal que los que han
pecie de pan. En el VIII en la regla de S. Crodegando quitado enteramente el caliz, y no permiten pueblo
no se hace mencion de la misa sino en los domingos participar de él, -

y en las fiestas; es probable que no se hubiese reser—
vado pan consagrado para cómulgar los fieles, y so camente de lo que dice S. Leon, que antes de llegar
bre todo los enfermos?
No es cierto que en algun tiempo la Iglesia haya
considerado como un mandamiento de Jesucristo las
palabras que dijo á sus apóstoles despues de la consa
gracion de el caliz, bebed todos de él, ni la comunion
bajo las dos especies como una obligacion impuesta á
los fieles por Jesucristo. Si su creencia hubiera sido
la misma que la de los protestantes, jamas hubiera
dispensado á nadie de comulgar bajo las dos especies.
Al contrario, ha creido siempre que el cuerpo de Jesu
cristo despues de su resurreccion, no pudiendo estar
realmente separado de su sangre, Jesucristo se con
tiene entero bajo una y bajo otra especie; que asi re
cibiendo una ú otra, se recibe todo á la vez el cuerpo
y la sangre del Salvador.
Tampoco es cierto que en 115 el concilio de
Constanza, mandando que en adelante se diese la
comunion á los fieles bajo la sola especie de pan, ha
cambiado la antigua doctrina de la Iglesia; que ha
quitado del mas augusto de nuestros sacramentos una
parte de lo que constituye su materia y esencia; que
ha condenado la institucion de Jesucristo y la prác—
tica de los apóstoles; que ha privado á los fieles de
la participacion de la sangre de Jesucrito, etc., como
se obstina Basnage en sostener Cuando una secta de
herejes se ha abstenido por supersticion de comulgar
bajo la especie de vino, en consecuencia de un dog—
ma falso y absurdo que sostenia, la Iglesia ha man
dado á los fieles la comunion bajo las dos especies, á
fin de que atestiguasen asi que no caian en este error;
cuando otra secta ha pretendido que esta comunion
bajo las dos especies era necesaría para la salva
cion, que la Iglesia no podia, sin prevaricacion, pri
Var á caliz á los legos, la Iglesia ha decidido lo con—
trario y les ha privado de ella en efecto, á fin de
Si se quiere parar en ello la atencion, se sigue úni.
los maniqueos á Roma, habia en ella pocos fieles que
no comulgasen bajo las dos especies; pero cuando un
gran número de estos herejes, perseguidos en Africa
por los vándalos se refugiaron en Roma, y recibieron
la comunion con los católicos, se notó que la multi
tud de los que rehusaban el caliz se habia aumenta
do mucho, y esto es lo que hizo reconocer á los ma
niqueos; y por último, si ninguno de estos fieles ha
bia estado en el uso de comulgar bajo una sola especie,
por qué habria dicho Gelasio que era necesario ó que
los fieles recibiesen el sacramento todo entero, ó que
se les privase absolutamente de él? ¿Ilabria podido
sospechar que los fieles imitasen á los maniqueos?
2." Tenia razon en decir este Papa que la division
de uno y solo misterio no puede hacerse (por supersti
cion como lo hacian los maniqueos) sin un grande sa
crilegio. En efecto, que era uno el creer, como estos
herejes, que habia daño ó peligro en recibir la especie
del vino, de la que se sirvió Jesucristo instituyendo la
Eucaristia. ¿Pero dónde está el crimen en no recibirlo
ó por repugnancia natural hácia el vino, ó por el has
tío de beber en el mismo caliz en que han bebido cien
personas, ó por cualquiera otra razon?
3." El monje Graciano no corria ningun riesgo en
el siglo XII colocando en su coleccion el decreto de
Gelasio entendido asi, y nadie, á escepcion de los pro
testantes, ha ideado entenderlo de otro modo.
Los maniqueos, consagrando el agua y no el vino,
cambiaban la institucion de Jesucristo. Beat sobre
conviene en ello; la Iglesia católica no cambia nada
en ello, puesto que consagra el agua y el vino como
hizo Jesucristo. La cuestion es probar que instituyendo
este sacramento el Salvador (uvo la intencion de
obligará todos los fieles á recibir las dos especies.
Si se quiere esto porque dijo á sus discípulos, bebed
TOMO . (:3
 COM (45%) COM
todos, etc., es necesario sostenºr tambien que impuso comunion pascual debe hacerse ó en la iglesia cate
á todos los fieles la obligacio de consagar la Euca dral ó en la parroquial, á fin de que los pastores
ristia, puesto que dijo al mismo tiempo: haced esto en puedan ver si sus ovejas son fieles en cumplir este de
memoria mia. Luc. c. 22, y . 19. ber. Por la mayor ó menor esactitud de los pueblos
Una prueba positiva de que la Iglesia romana hace en satisfacerla, se puede juzgar con seguridad de la
mas de 1200 años no ha cambiado de creencia, es que pureza ó la corrupcion de las costumbres de una co
los griegos y las demas sectas orientales, que desde marca. En las grandes poblaciones, en las que se reu
esta época se separaron de ella, no la han acusado nen todas las pasiones y vicios de la humanidad, no
nunca de la comunion bajo una sola especie, aunque hay el mayor escrúpulo en violar esta ley de la Igle—
hayan conservado el uso de comulgar bajo las dos; sia, y por la multitud de culpables, no se les puede
mas justos que los protestantes, han comprendido la castigar con las penas que el concilio de Letran decre
sabiduria de las razones que dirigieron su conducta. tó contra ellos.
Perpet. de la fé, t. 5, l.8, p.13%. -
COMUNIONFRECUENTE. Jesucristo mandó á los
Ño hay, pues, necesidad de ceder á las instancias adultos la comunion con estas palabras: «Si no comeis
ue han hecho los husitas, los calixtinos, los discípu la carne del hijo del Hombre, y no bebeis su sangre, no
los de Carlostadio para que se reslableciera la comu tendreis la vida en vosotros». Joan. c. 6, y. 5.
nion bajo las dos especies; la terquedad tenia en esto Pero no fijó ni el tiempo ni las circunstancias en que
mas parte que la devocion. La supresion del caliz era obliga este precepto; la Iglesia es la que las determi
una disciplina establecida hacia mucho tiempo para na. En los primeros siglos la piedad, el fervor, la es—
remediar muchos abusos y prevenir el peligro de pro posicion á las persecuciones obligaban á los fieles á co
fanar la sangre de Jesucristo. La complacencia que mulgar con frecuencia.
tuvo la Iglesia de ceder por el compactum del conci Vemos en las Actas de los Apóstoles que los fieles
lio de Constanza en favor de los husilas no produjo de Jerusalen perseveraban en la oracion y en la frac .
ningun buen efecto; estos herejes perseveraron en cion del pan, palabras que se entienden de la Euca
su rebelion contra la Iglesia, y continuaron inundan ristía. Durante la persecucion, los cristianos se arma
do de sangre su patria. ban todos los dias con este pan de los fuertes para re
La misma cuestion se agitó despues en el Concilio sistir al furor de los tiranos, S.Cipriano, Epist. 56.
de Trento. El emperador Fernando y el rey de Francia Cuando volvió la paz á la Iglesia, se resfrió este
Cárlos IX pedian que se restableciese el uso del caliz. fervor, y ésta se vió obligada á dar leves para fijar
Al principio prevaleció el parecer contrario; pero al el tiempo de la comunion. El canon 18 del concilio
fin de la sesion 22 los PP. dejaron á la prudencia del de Agda, celebrado el año 506, obliga á los clérigos
pontífice el conceder esta gracia ó negarla. En conse á comulgar siempre que asistan al sacrificio de la
cuencia, Pio IV por súplica del Emperador la otorgó misa, l. , concil. p. 1585; pero parece que toda
á algunos pueblos de la Alemania, que no usaron me via no ha habido una ley precisa para obligará los
jor de esta condescendecia que los bohemios. Una legos á la comunion frecuente. S. Ambrosio exhor—
multitud de monumentos eclesiásticos prueban que tando á los fieles á que se acerquen con frecuencia
este modo de comulgar no es necesario ni de precep á la sagrada mesa, observa que en Oriente habia
to divino, ni de precepto eclesiástico; que no hay, de muchos que no comulgaban mas que una vez al
consiguiente, necesidad de cambiar la disciplina ac año, l. 5, de Sacram., c. .. S. Juan Crisóstomo re..
tua", que ha sido establecida por buenas razones y que fiere que en su tiempo unos no comulgaban mas
los prótestantes no han atacado mas que con malos que una vez al año, otros dos, y otros mas». ¿A cuá
argumentos. les alabaremos? dice: ni á unos ni á otros, sino úni—
COMUNION PASCUAL Es la que se hace en la fes camente a los que comulgan con un corazon puro,
tividad de la Pascua. El l." Concilio de Letran, que es una conciencia limpia y una vida irreprensible».
el 12." general, celebrado el año de 1215, ha dado Hom. 17, in Epist. ad hebr. Los PP. cuando exhor—
el decreto siguiente, cap. 21. «Que todos los fieles de taban á los fieles á la comunion frecuente, nunca de
ambos secsos, cuando hayan llegado á la edad de dis jaban de ponerles á la vista las palabras de S. Pa
crecion, hagan en particular y con sinceridad la con blo: «El que coma el pan o beba la sangre del Se—
fesion de sus pecados á su propio sacerdote, al menos ñor indignamente, será reo del cuerpo y de la sangre
una vez al año... y que reciban con respeto, al me de Jesucristo».
nos en tiempo de pascuas, el Sacramento de la Euca Viendo la Iglesia hácia el siglo VIll que habian lle
risia, á no ser que por consejo de su propio sacerdo— gado á ser muy raras las comuniones, obligó á los fie
te crean deber abstenerse de él cierto tiempo por al les á comulgar lres veces al año, en Pascua, Pente
gana causa razonable; de otro modo sean privados de cóstes y Natividad. Lo vemos por el cap. El si non
la entrada en la Iglesia durante su vida, y de la se frecuentius, de Consecr, Dist. 2, y por un Decretal
pultura cristiana despues de su muerte». que Graciano atribuye al papa S, Fabian, pero que
Por costumbre de la mayor parte de las diócesis, es del siglo VIII. lácia el XIII, habiendo llegadó á
está establecido que la comunion pascual puede ha ser todavia mas grande la tibieza de los fieles, el
cerse durante la quincena de pascuas, empezan lo des .." concilio de Letrar les mandó que recibiesen
de el Domingo de Ramos hasta el de Cuas modo in al menos en Pascua el sacramento de la Eucaris
clusive; tambien hay algunas en la que los obispos es lia, bajo la pena de privárseles la entrada en la Igle
tienden este intérvalo hasta tres semanas, y permiten sia durante su vida, y de la sepultura eclesiástica
empezar las comuniones pascuales el Domingo de Pa despues de la muerte. Hemos citado su decreto en el
sion. Tambien se halla establecido por el uso que la artículo precedente. Por las palabras al menos, el
 COM h55) COM

concilio demuestra que desea que los fieles no se li le daba la comunion sino como á los clérigos estran -
miten á la comunion pascual, sino que reciban la Eu - jeros. Si era sacerdote, ocupaba el último puesto en
caristia con mas frecuencia. Deja á la prudencia del tre los sacerdotes y ante los diáconos, como lo hubie
confesor el decidir si en ciertas ocasiones conviene se tenido un sacerdote estranjero, y lo mismo los
diferir la comunion, aun la pascual, en consideracion diáconos y los subdiáconos. El segundo concilio de
á las disposiciones del penitente, lo que prueba que Agda manda que el clérigo que rehuse frecuentar
el concilio no ha tió menos que los PP. á la ne la iglesia sea reducido á la comunion estranjera ó
cesidad de estas disposiciones. peregrana.
El concilio de Trento, sess. 13, can. 19, ha renova COMUNION. En la liturgia es la parte de la misa
do el canon del concilio de Letran; c. 8, exhorta á losen la que el sacerdote loma y consume, bajo las es—
fieles á que comulguen con frecuencia; sess. 22, c. 6, pecies del pan y del vino, el cuerpo y sangre de Je
desearia que á cada misa comulgasen los asistentes. sucristo. Tambien se toma esta palabra por el mo—
Establece que para no comulgar indignamente, es ne mento en que se administra á los fieles el sacramento
cesario estar libre de pecado mortal; que para co— de la Eucaristia: en este sentido se dice que la mi
mulgar con fruto son necesarias disposiciones mas per sa está en la comunion.
fectas; que para comulgar frecuentemente, es necesa COMUNION. Se llama tambien la antífona que reci
rio una fé firme, una devocion y una piedad sincera ta el sacerdote despues de haber tomado las ablucio
y una grande santidad, sess. 13, c. 8. nes y antes de las últimas oraciones que se llaman
En cuanto á la necesidad ó suficiencia de las dis— postcomunio.
posiciones requeridas para la comunion frecuente, los
teólogos modernos han caido en escesos y en errores “Comunismo. Secta nueva, cuyas doctrinas
muy opuestos á la doctrina de los PP. y al espíritu parecen estar reasumidas en el Credo comunista que
de Iglesia. Unos, ocupados únicamente de la gran M. Cabet ha publicado en 181; hé aqui la sustancia.
deza y de la dignidad del sacramento, de la distan— 1." No hay mas Dios que la naturaleza.
cia infinita que hay entre la magestad de Dios y la 2.º Proviniendo todos los males de la desigual —
pequeñez del hombre, han ecsigido disposiciones tan dad social, no hay otro remedio que oponerla que
sublimes, que no solo los justos, sino aun los mayo una igualdad general y absoluta.
res santos, no podrían comulgar aun en la Pascua. 3." La naturaleza no ha criado á unos para ser
Esto parece que resulta del libro de la frecuente co— señores, ricos y holgazanes, y á otros esclavos, po—
munion compuesto por el Dr. Arnaldo. bres y abrumados por el trabajo; Todo es para todos.
Otros, olvídando el respeto debido á Jesucristo pre .." La institucion de la propiedad ha sido el mas
sente en la Eucaristia, y atentos únicamente á las funesto de todos los errores; para poner fin á las des—
ventajas que se pueden sacar de la comunion frecuen gracias de la humanidad es necesario restablecer
te y diaria, no han tratado mas que de facilitar su la comunidad de bienes.
práctica, olvidando insistir y apoyarse en las disposi Tiende esta teoria, como todas las que una presun
ciones que ecsige tan augusto sacramento. II n ense tuosa filosofia ha inventado en estos últimos tiempos,
ñado que solo el hallarse libre de pecado mortal bas— á destruir la idea de Dios, á sustituirla con un panteis
ta para comulgar muy frecuentemente y aun todos los mo absurdo, á trastornar todos los fundamentos de
dias; que las disposiciones actuales de respeto, de la moral y á propagar por todas partes la confusion.
atencion, de deseo y la pureza de intencion no son El comunismo se ha propagado en Suiza, donde
mas que de consejo. En este esceso ha caido el P. Pi Weitling ha sido ardiente apóstol. Habiendo nom
chon. jesuila, en una obra titulada El espíritu de Je - brado el gobierno de Zurich una comision para ec
sucristo y de la Iglesia sobre la frecuente comunion. saminar las tendencias de los comunistas, el conse
Estos dos escritos tan diferentes han hallado en su jero de Estado, Bluntsichli, ha redactado un infor
tiemp y aprobadores y censores respetables, y han ocame en 8.° de 130 pág. que contiene las noticias mas
sionado vivas contestaciones; afortunadamente se han curiosas y que el gobierno dirigió inmediatamente á
calmado, y no necesitamos renovar el recuerdo de lo los Estados confederados y á los ministros de las po
que se ha dicho por una y otra parte. Véase el anti tencias estranjeras.
guo Sacramentario por Grandcolas, 1.° parte, p. 29%. En el capítulo 1" titulado: Principios de los comu
COMUNION LEGA., Antigüamente era un castigo nistas, la comision refiere el comunismo á las mácsi
para los clérigos que habian cometido alguna falta gra mas de igualdad de Robespierre y de Babeu. Se es
ve el reducirlos á la comunion lega, es decir, al esta— tractan despues muchas páginas de una obra de
do de nn simple fiel, y ser tratados lo mismo que si Weitling, en la que se ve que levantándose contra la
nunca hubieran sido elevados al clericato. Véase Bin institucion de la propiedad y contra el dinero, como
gham, Oríg. ecles. l. 17, c. 2. Este mismo castigo prue fuentes del egoisino en el mundo y de los sufrimientos
ba que siempre ha habido una distincion entre el es de las masas, quiere, despues de haber destruido el
tado de los clérigos y el de los legos. actual órden social, establecer una comunidad en la
COMUNION ESTRANJERA O PEREGRINA. Era que reinará la igualdad del trabajo y de los goces en
otro castigo de la misma naturaleza, pero con un nom tre los hombres; no habrá en ella ni Estado ni Igle
bre diferente, al que muchas veces condenaban los sia, ni propiedad individual, ni categorias, ni nacio
cánones á los obispos y á los clérigos. nalidad, ni pal ria.
No era ni escomunion ni deposicion, sino una es El capítulo 2." se titula: Medios de ejecucion.
pecie de suspension de las funciones del Orden y la En la 1." seccion los estractos de la corresponden
pérdida de la categoria que tenia un clérigo; no se cia cogida en casa de Weitling esponen lo que se re
 (COM 456 COM
fiere al establecimiento de las asociaciones como me han adquirido algunas relaciones suizas, que no care
dios de propagar el comunismo. Se ven entre otros, cen enteramente de importancia. En Berna los comu
que se han tratado de utilizar, las sociedades de tra nistas contaban tambien con el apoyo de un miembro
bajadores alemanes que ecsistian ya para el canto y del gobierno; no decidiremos, sin embargo, hasta qué
la instruccion; pero que los comunistas han encon punto estén fundados. En Argovia algunos suizos se
trado temibles adversários en la joven Alemania, cu— ganaron al comunismo; en Zollingua desplegaron mu—
ya actividad esencialmente política tiene por objeto la cha actividad.» En efecto, el informe publica mu
propagacion de los principios republicanos. La lucha chas cartas dirigidas á Weitling por G. Sigfried de
de los dos partidos ha sido tan larga y perlinaz, que Zofingua
se ha balanceado recíprocamente con el buen écsito Pero sobre todo con los literalos alemanes es con
y con los reveses. Llamaban á estas disidencias los uien los comunistas han estado en relacion, segun
trabajadores estranjeros antigua nobleza; los parti º la comision. Desde luego está el poeta Hervvegh;
darios de la joven Alemania, girondinos; y los comu Becker, que lo condujo á la reunion comunista en Gi
nislas, montañeses. Estos han hallado tambien oposi nebra, escribió á Weitling que se esperaba poner en
cion en las asociaciones de Grutli, compuestas esclu contribucion una parte de sus ducados. Despues se
sivamente de suizos, cuya tendencia es la unidad disputa mucho sobre el profesor Follen y el doctor
ública de la Suiza, segun un informe dado por Frobel, ambos de Zurich.
Weitling. En cuanto á la joven Alemania, cuya ten La 3." seccion del capitulo 2.º es relativa á la pren—
dencia es la unidad política de la Alemania con la re sa. Los comunistas han intentado mas ó menos hallar
pública, se componia de alemanes y suizos. Compo— acogida eu algunos diarios de la Suiza alemana y de
niéndose tambien las asociaciones comunistas de ale la Alemania. Weitling estableció tambien al princi—
manes y de algunos suizos, tienen miras mas estensas; pio uu periódico con el título de El grito de afliccion
tienden á la libertad de toda la humanidad, á la abo de la jucentud alemana, despues bajo el de La nueva
licion de la propiedad, de las sucesiones, del dinero, generacion, que ha aparecido sucesivamente en Gi
de los jornales, de las leyes y de las penas, y á una nebra, en Berna, en Vevey y en Langethal. Su obra
igual reparticion de los goces en todas sus relaciones principal lleva el título de Garuntias de la armonia
naturales. y de la libertad; y por haber querido imprimir el
El informe entra despues en delalles sobre la orga Erangelio del pobre pecador, se le prendió y registra
nizacion de las asociaciones comunistas, que tienen ron sus papeles; trata de representar en él áJesucris
por objeto y medio la fraternidad, el adelanto social, to como un comunista que ocultaba sus principios ba
la propaganda y la lemplanza, sobre las condiciones jo parábolas, y quiere que la Sagrada Cena sea una
y las formas de la admision en la asociacion, el orden comida de amor, en la que en lugar de recibir una hos
de los trabajos en las sesiones, las contribuciones lia ó un pedacito de pan, puedan los pobres sentarse
financieras y las asistencias. Estas sociedades son se— al lado de los ricos para celebrar la pascua comiendo
cretas, y se promete no revelar nada de lo que pase y bebiendo juntos pan, vino, carne, leche, patatas y
en ellas. Todo anuncia que el comité director se halla pescado. Semejantes estravagancias no hay necesidad
en París. En los cantones de Ginebra, Vaud, Neucha de reularlas.
tel (en Loche y en la Chaus-de-Fonds) Berna, Ar
goyia y Zurich es particularmente donde se han no— Councepciona 1 mmmaculada de la Santí—
lado asociaciones comunislas. sima a Virgen. El sentiniento comun de los teó
La 2." seccion de este capítulo, la que trata de los logos católicos es que la Virgen Maria, madre de Dios,
vinculos personales, no es la menos curiosa. Los prin– ha sido ¿ del pecado original cuando fué
cipales corresponsa'es de Weitling tienen un gee es— colcebida en el seno de su madre. Esta creencia está
tablecido en París, en relacion con Cabet, Sebastian fundada:
Seiler, que ha vivido en diferentes partes de la Suiza, 1." En el sentimiento de los PP. de la Iglesia mas
en Becker, en Ginebra, y Simon Schmidt en Lausa respetables. Los referiremos despues.
na, todos comunistas y alemanes, lo mismo que el 2." En la precaucion que ha tomado el concilio
profela Albrecht, que despues de haber sido espulsa— de Trento, sess. 5, en la que, estableciendo que todos
do de muchos cattores ha hallado un asilo en Bale— los hijos de Adan nacen manchados con el pecado ori
Campagne. Las demas personas, que sin formar parte ginal, declara que no es su intencion comprender á
de la asociacion estan en relacion inas ó menos íntina la Santísima Virgen. En 1439 el concilio de Basilea
o separada con ella, son la mayor parte alema— autorizó la misma creencia; su decrelo fue recibido
nes algunos provistos de actas recientes de natura por la universidad de Paris y por un concilio de Avi
17d Cl0 l. ñon en 1 37.
En cuanto á los suizos, hé aqui lo que se lee en el 3." En los decretos de muchos pontífices que han
informe, pág. 55, 56 y 62: «Los suizos distingui aprobado la festividad de la Concepcion de la Santísi
dos por el nacimiento ó por la educacion se mantienen una Virgen y el oficio compuesto con este motivo, y
asi todos libres. Es cierto que se ha tralado con mu— que han prohibido predicar y enseñar la doctrina con—
cho ardor de coger a un hombre de Eslado importan - traria. Asi han obrado Sisto IV, Pio V, Pablo V,
e en el canlon de Vaud, asi que se le veia por las Gregorio XV, Alejandro VII (n. 27, p. 7). Parece
habilaciones; mas, sin embargo, parece que no se ha que esta fiesta era ya celebrada en el Occidente en el
dejado ganar de cualquier modo. Los comunistas han siglo IX, y que todavia es mucho mas antigua en
sido mas felices bajo las relaciones personales en el Oriente. Véase Assemani, Cal. univ. t. 5, p. 33 y
canton de Berna y en Argovia, en los que al menos siguientes.
 CON (437) CON

En consecuencia la facultad de teologia de Paris ¿ sobre el salmo 1 , dice que ha sido esenta
e toda mancha de pecado.
en 1497 estableció por un decreto que nadie seria el V, S. ¿ discípulo de s, Juan Crisósº.
-

admitido al grado de doctor que no se obligase por moEny su sucesor, Orat. 6, Laudatio º; Genitr, dice
juramento á defender la inmaculada Concepcion; han que la santísima Virgen ha sido formada de una tierra
hecho lo mismo en la mayor parte de las demas uni
versidades. pura.
bre laSe le atribuyen
santísima con razon
Virgen, los tres sºººººº!
que antiguamenº pasaban
Aunque este sentir no esté decidido espresamente porque eran de S Gregorio Taumalurgº º los que
como artículo de fe, es tan análogo á la doctrina cris
se
tiana, al respelo debido á Jesucristo, á la persuasion bien eseña esta misma doctrina. Basnage convierººº!
de todos los fieles, que se le puede tener como creencia
en estos. Gerónimo, sobre el salmº'º. dice que
católica ó casi universal. Maria no ha estado nunca en las tinieblas sinº ººº!"
Los protestantes han esclamado contra esta creen
pre en la luz. Se sabe que el mismo S. Agustin, escri
cia, nacida en los últimos siglos; dicen que es espre
biendo contra los pelagianos, L. de Nº º Grat. c.
36, ha esceptuado espresamente á la salºº Virgen
samente contraria al senlimiento de los antiguos PP.,
que han establecido que el pecado original ha pasado de En
número
el VI, de
S.las criaturasSermº,
Fulgencio, culpables de pecadº:
de Laudib, ,
Maria,
á todos los hijos de Adan, esceptuando solo á Jesu observa que el Angel llamando áMºrº, llena de gra
cristo. Erasmo habia citado un gran número de sus cia ha hecho ver que la antigua sentencº de ira esla
pasages, Bosnage en su Hist. de la Iglesia, l. 18, ba absolutamente rovocada.
c. 11 y 1.20, c. 2, ha hecho todos sus esfuerzos por En el VIII, S. Juan Danasceno llama á esta santa
probar que en esto la Iglesia romana ha cambiado la Madre de Dios, un paraiso en el que la antigua ¿y.
antigua doctrina, y se ha separado evidentemente de
la tradicion que ella tiene como regla de fe. piente no ha podido penetrar. Homº Nat. B. M. de
Ya en el VII, bajo el reinado de Heraclio, Jorge de
Pero él mismo ha conocido que todos sus argu Nicomedia consideraba la Concepcio inmaculada de
mentos, que son los mismos que los de Daillé, no son la santísima Virgen como una esividad de antigua fe
mas que negativos, y no forman una gran prueba. cha; y al menos desde esta época, los griegos han
Los PP., dicen estos controversistas, no han escep—
tuado á la santísima Virgen, cuando han hablado de llamado constantemente á Maria PANACIRANº, toda
pura, sin mancha, sin pecado; nº han tomado esta
la universalidad del pecado original; luego es lo mis reencia de la iglesia romana, puesto que la ºººººº!
mo que si hubieran enseñado espresamente, que la san
tísima Virgen lo ha recibido como los demas hijos de van todavia. Porqué, pues, los proleslaºº s
Adan; esta consecuencia no es verdadera. Los PP.
halan su bilis mas que contra nosotrºs y perdonan á los
griegosº Refiriendo con tanto cuidado lo que parece
no han tratado espresamente la cuestion de saber si la opuesto á º, es necesario no pasar el
santísima Virgen ha sido ó no esenta del pecado ori silencio lo que la prueba.
ginal. Habian enseñado terminantemente, que no ha
bia sido manchada con él; nunca se hubieran atrevi
¿que 1387 la cuestion de la Concepcíon
inmaculada hizo mucho ruido en Paris, y lº la uni
do los teólogos católicos á abrazar la opinion contra versidad escluyó de su seno á los dominicaººº, Pºº ha
ria. Si espresamente la hubieran esceptuado, entonces ber defendido la opinion contraria tº: de la ¿
su Concepcion inmaculada no seria una simple opinion galicana, t. 1, l. 1, año 1387. En la actualida
teológica, sino un dogma de fe; y la Iglesia lo hubiera
asi decidido en el concilio de Trento. Por lo que con éstos religiosos participan de la creenººººººº par
¿s dºs conventos de religiosas, quellevan enºº
venimos que no es un dogma de fe; los mismos pon el nombre de la Concepcion, son franciscanºº º hijas
tífices Pio V, Gregorio XV y Alejandro VII lo decla de la Orden Tercera de S. Francisco. • º

raron asi, y han prohibido tratar como herejes á los “Sobre la inmaculada Concepciº de Maria, véasela
que han defendido lo contrario. disertacion polémica del cardenal Luis Lambruschi
¿Es cierto que la creencia actual, se haya estable ni, secretario de Estado de S.S., traducida al fran
cido sin ninguna prueba sacada de la Sagrada, Escri ces, en 8."
tura ni de la tradicion? En la salutacion angélica di
rigida á Maria, Luc. c. 1, y 28, la palabra griega Ke con elencia. Juicio que hacemos mºººººººº
JAuroMENE no significa soló, llena de gracia, sino conce mos de estras obligaciones morales, de la bon
bida en gracia; Órígenes lo ha entenido asi, Homil, 6, dad ó malicia de nuestras acciones, Sº» antes de
in Luc, «No recuerdo, dice, haber hallado esta pala acerlas o despues de haberlas hechoº º todas
bra en otra parte en la Sagrada Escritura; esta salu vuestras obras, dice el Eclesiástico, oid á vuestra
tacion no ha sido dirigida á ningun hombre: se ha re alma, y sedle fieles; asi es como se obser º los man
servado solo para Maria». Sin embargo se habia di damientos de Dios: Eccli. c. 32, y 27. Por ºsººººº
cho des. Juan Bautista, y, 15, que sería lleno del ¿nto interior Dios nos intima su ley, nos hººººº
Espíritu Santo desde el vientre de su madre; el privi nocer nuestros deberes, nos acusa nuestras faltas.
legio de María se ha estendido mas, ¿Entienden mejor Cuando estamos ciegos por algun interés: Pº al
el griegolos protestantes que Orígenes?
En siglo IV, S. Anfiloco, obispo. de Icona, Orat guna pasion, ordinariamente nuestra conciencia es
recta; pero un vivo interés, una, pasº" violenta,
l, id S. Deip. et Simeon, dice que Dios ha formado á
) ()()(º iones ó hábitos contraidos hace mucho tiem
la Virgen María sin mancha y sin pecado. En la li preocupacion
turgia de S, Juan Crisóstomo, que es mas antigua que 1 - 5". Lo esta ya al español , y la ha publicado El
él, es Maria llamada sin mancha en todo sºnido º 6 a 5lico.
omniparte inculpata. Lebrun, t. 4, p. 108. S, Am
 CON 458 CON
po hacen muchas veces la conciencia erronea y falsa. que para que una conciencia falsa nos escuse delante
S. Pablo, Rom. c. 1, y. 23 dice: «Todo lo que no de Dios, es necesario, 1.° Que no hayamos descuidado
es segun la fe es pecado». Es cierto que por fé san nada para instruirnos, y que el error en que nos ha—
Pablo entiende el juicio de la conciencia; que asi esta llemos sea invencible. 2.º"Que este error no provenga
mos obligados á seguir en nuestras acciones el dicta de ningun motivo reprensible, de ninguna pasion cri
men de nuestra conciencia, á hacer lo que nos pres minal, de ninguna preocupacion pertinaz 3." Que
cribe y evitar lo que nos prohibe; pero hay que hacer con respecto á los hombres, todo crimen que perturbe
muchas observaciones sobre este asunto. la sociedad es digno de pena, y debe ser castigado
Bayle, en su Comentario filosófico, 2." parte,, c, 8, cualquiera que haya sido a conciencia del que lo haya
9 y 10, ha reunido un gran número de sofismas para cometido con propósito deliberado.
probar que la conciencia errónea ó falsa nos impone la L0 que hay de notable en esto, es que estos dos au
misma obligacion que la conciencia recta; que debe tores han querido hacer uso de su principio para pro
mos seguir igualmente el juicio de la una que de la bar que los herejes tienen derecho de seguir y de
otra. Este principio es falso por ser demasiado gene profesar sus errores desde el momento que les parece
ral: el mismo Bayle se ha visto obligado á ponerle que son verdades; que se peca contra justicia, cuando
muchas restricciones. se usa de la fuerza para reprimirlos; que querer ha
Despues de haber establecido que la obligacion es cerles cambiar de religion, es forzarlos á óbrar con—
la misma, sea que nos engañe la conciencia en mate tra sil conciencia, quilarles todo el respeto por la ver—
ria de hecho que de derecho, añade, con tal que el dad y la virtud, precipitarlos en el pirronismo en ma
error sea absolutamente inocente y no provenga de teria de moral, en el ateismo, y en el libertinaje, etc.
alguna pasion criminal. Cuando se le objeta que se Pero segun las evidentes reflecsiones que acabamos
deduciria de su principio, que los magistrados no pue de hacer, antes de decir que los hereges pueden y
den condenar legítimamente á un malhechor, que ha deben en conciencia profesar sus opiniones, y que se
juzgado que le era lícito robar ó cometer un asesinato obra mal incomodándolos, es necesario empezar por
en tal ó cual ocasion, ni á un ateo que dogmatice, ni probar que su error es involuntario é invencible, y
á un insensato que enseñara que la prostitucion, el que no han descuidado nada para instruirse, que han
adulterio, no son crímenes, desde que él se halla per buscado la verdad de buena fe, que no han sido lle
suadido de ello; Bayle responde que estas consecuen vados por ninguna pasion, ni por ningun motivo sos—
cias son falsas: 1.” Porque no puede haber en ellas pechoso. Es necesario demostrar que en su doctrina
errorinocente en puntos de moral tan claros como no hay nada que pueda inquielar al gobierno, ni en
estos. 2." Porque si un malhechor ha descuidado ins su conducta nada contrario al reposo y al buen orden
truirse en lo que se debe obrar ó evitar, seria punib'e de la sociedad. Es necesario estar seguro que no lle—
por haber seguido una conciencia falsa. 3." Porque los varán muy allá sus pretensiones, que no abusarán de
magistrados estan obligados á castigar á todo malhe la tolerancia que se les conceda, y que la tendrán ellos
chor que trastorne la sociedad, sin cuidarse de saber, mismos con los demas. Si falta alguna de estas con—
si su conciencia ha sido verdadera ó falsa, recta ó er diciones, todas las bellas disertaciones hechas en fa—
l'0Il62a. -

vor de los herejes son falsas, y no son mas que pala

Lo mismo despues de haber dicho que cuando Dios breria.
nos manda seguir la verdad, esto debe entenderse de No es cierto que obligándoles á dejarse instruir, se
lo que nos parezca cierto, de la verdad aparente y les obliga á obrar contra su conciencia; se les obliga
putativa, lo mismo que de la verdad absolula, aña únicamente á ilustrarla y á reformarla; la negativa
de con tal que se hayan puesto todas las diligen que ellos dan no es delicadeza de conciencia sino pura
cias necesarias para no engañarse, y salvo el ver, cuál terquedad; lo que lo demuestra es que no son escru—
es la causa que hace que la mentira parezca algunas pulosos en los medios de estraviar la instrucion y des
veces verdad. embarazarse de los misioneros, No se les obliga á ho—
Por ultimo, despues de haberse objetado que si su llar con los pies la verdad y la virtud, sino á buscar
principio general es cierto, escusa á los perseguido la verdad y á respelar la virtud; es singular que los
res que siguen los movimientos de su conciencia; Con herejes y sus apologistas no conocen mayor virtud
viene al principio en esta consecuencia, despues la que la obstinacion maliciosa. Como en esta discusion
retracta diciendo que no se sigue que se haga sin cri se trata principalmente de los calvinistas, veremos en
men lo que se hace segun su conciencia; que un dere— su lugar de qué modo han formado su conciencia, por
cho puede ser mal adquirido, y que se puede abusar qué motivos han abrazado lo que ellos llaman verdad,
de él, llevándolo al estremo. Es imposible contrade de qué medios se han valido para propagarla, el caso
cirse de un modo mas terminante. ue han hecho de las instruciones y de los medios de
Barbeyrac, que ha repetido la mayor parte de los ¿ cómo han observado la tolerancia que ecsi
sofismas de Bayle, Moral de los PP. c. 12, S. 55, ha gian para ellos.
llevado el aferramiento todavia mas allá; «Que sea Entre nuestros incrédulos modernos, los que han
vencib'e, dice, ó invencible el error de un hombre, ha querido forjar una moral independiente de todo cono
brá pecado siempre que de él fuese prevenido». Se cimiento de Dios han discurrido tambien á su modo
gun esta decision hé aqui todos los malhechores de sobre la conciencia». La conciencia, dice uno de ellos,
que acabamos de hablar plena mente justificados; , asi es en el hombre el conocimiento de los efectos que sus
es como Barbeyrac corrige los errores de la moral de acciones producian sobre los demas. Para el supers
los PP. de la lglesia. ticioso (es decir, para el que cree un Dios) es el co
Es evidente por las confesiones del mismo Bayle, nocimiento que cree tengan los efectos que sus acio
 CON 450 CON
nes producirán en la divinidad; pero como no tiene CONCIENCIA (LIBERTAD DE). Se ha abusado
mas que ideas falsas, su conciencia errónea le permi estrañamente de esta palabra en el siglo pasado y en
te muchas veces obrar mal, ser intolerante, persegui el actual. Si los que la reclamahan no hubiesen pedi
dor, cruel, turbulento, insociable. La conciencia ordi do mas que la libertad de creer ó de no creer lo que
nariamente no nos acusa mas que de cosas que ve— ellos juzgasen conveniente, esta demanda hubiera si
mos desaprobadas por nuestros semejantes; no espe - do absurda; nadie en este sentido puede obligar la
rimentamos la vergüenza y los remordimientos sino conciencia de otro. Pero bajo el nombre de libertad de
por las acciones que creemos deben parecer ridículas, conciencia los protestantes querian la libertad de pro
dignas de desprecio ó de castigo á los ojos de los hom fesar públicamente y egercer con toda la pompa po
bres.... Cuando está viciada la opinion pública, aca sible una religion diferente de la religion dominante,
bamos por recibir gloria del vicio y de la infamia; los apoderarse de las iglesias, desterrar de ellas á los ca
hombres temen mas la vista de sus semejantes que las tólicos, echar fuera y esterminar á los sacerdotes; es
miradas de la divinidad » Sist, soc., 1.º parte c. 13. to es lo que han hecho en todas las partes en que han
De teoria tan bella se sigue: 1." Que la conciencia sido señores En el dia los incrédulos, predicando la
de un ateo no tiene otra regla que el juicio de los de— tolerancia y sosteniendo que no se debe obligar la
mas hombres; que cuando un vicio deja de ser re conciencia de nadie, pretenden que les está permitido
prendido y castigado le comete sin vergüenza y sin declamar y escribir contra la religion, insultar im
remordimientos. ¿Dónde están, pues, las pretendidas punemente á los que están encargados de enseñarla:
nocienes de bien y de mal moral, de vicio y de vir esto es lo que han hecho en todos sus libros.
tud, que algunos especuladores han sido ser in Para robustecer sus pretensiones han hecho causa
mutables, independientes de toda ley divina y huma— comun con los protestantes, y han renovado sus que
na? 2.° Que cuando un ateo se atreva á profesar su jas y sus antiguas calumnias. ¿Por qué no llaman
doctrina, eslá seguro que no parecerá ni reprensible, tambien en su socorro a los judios, los turcos, y los
ni digna de castigo á los ojos de los hombres; de otro paganos? Sin duda que estos tienen tambien una con
modo es un furioso que obra contra su conciencia. ciencio, por consiguiente, el derecho incontestable de
3.° Que en secreto y fuera de la vista de los hombres venir á predicar y profesar su religion entre nos—
un ateo puede en conciencia cometer el crimen que otros.
le agrade. - Cuando los primeros cristianos pedian á los empe—
º El autor contradice su propia doctrina con el radores la libertad de conciencia eran mas modestos;
ejemplo de todos los que él llama supersticiosos, pues pedian no ser arrastrados al pie de los altares para
to que temen mas los ojos de Dios que los de los hom ofrecer el incienso á los ídolos, no ser enviados al
bres. ¿Cuántos hombres no se pueden citar que han suplicio por el nombre de cristianos. Podemos con—
querido mejor sufrir el desprecio, la ignominia, los vencernos de esto por las apologias de S. Justino y de
tormentos y la muerte, que hacer una accion contra Tertuliano. Este último, dice que es una impiedad
ria á la ley de Dios y á su conciencia? No hacian, pues, violentar la religion y obligará un hombre á adorar
ningun caso del juicio de los hombres; lo despreciaban un Dios que no quiere. Apol. c. 2. No vemos qué
por seguir el de su conciencia. 5."¿Cuántas veces los ventaja se puede sacar de esto en favor de la preten
mismos malhechores no han convenido en que resis sion de los protestantes y de los incrédulos.
tian á la voz de su conciencia, cometiendo crímenes Los primeros cristianos entregados á los suplicios
por los que sabian que nada tenian que temer de par desde su nacimiento, no han tomado las armas para
te de los hombres? 6.” Aun en medio de las costum alcanzar por la fuerza la libertad de conciencia; no en
bres mas corrompidas, que se pregunte á un hombre traron en nínguna de las conjuraciones formadas con—
si al accion, que él puede permitirse mas de una vez, tra la vida, ó contra la autoridad de los emperadores;
es buena ó decidirá sin dudar que es un crímen; no intentaron apoderarse de sus personas á fin de
asi condenará á la vez el juicio de sus semejantes y su darles cristianos por ministros y consejeros. No pu
propia conducta. Hay, pues, otra regla de conciencia sieron á su cabeza grandes del imperio, ambiciosos y
que el juicio de los hombres, y nosotros sostenemos descontentos; no procuraron influencias en los asuntos
que esta es la ley de Dios, que él mismo la grabo en de política y de gobierno; no publicaron escritos se
todos los corazones, pero que muchas veces está obs diciosos contra el príncipe ni contra los magistrados,
curecida por la estupidez, por las pasiones, por una no obstante que hubieran podido alegar tan fuertes
mala educacion, por la corrupcion de las costumbres razones al menos como los calvinislas.
públicas. Cuando Constantino y Licinio, ambos paganos, die
Los remordimientos de la conciencia son una gracia ron un edicto de tolerancia, los cristianos no se cui
que Dios ha hecho al pecador para escitarlo á la pe daron de pedir ciudades de seguridad, ni de apo
nitencia. El primer hombre tuvo la esperiencia in derarse de ellas para poner guarnicion de soldados
mediata de esto despues de su pecado, vió su desnu cristianos, ni salas semipartidas en los tribunales;
dez, se ocultó, no se atrevia á presentarse á la visla nunca hubieran tenido la insolencia de tratar con su
de su criador. Dios dice á Cain cuando melilaba su soberano como de igual á igual; nunca hubieran diri
crímen: «Si obras bien, tú recibiras el premio, si mal gido á los emperadores ni á los magistrados memorias
tu pecado se levantará contra lí». Gén. c. ... y . 7. amenazadoras, quejas contra los abusos del gobierno,
David dice llorando La vista de mis pecados no me insultos contra la antigua religion, con el fin de que
deja descanso». Ps.37, y ... Un criminal que llegase se prohibiese su egercicio.
á no sentir ya los remordimientos seria un monstruo Hechos señores por la conversicn de los empera —
temible. dores, no saquearon, demolieron, ni quemaron los
-
 CON l60 CON

templos delos paganos por su propia autoridad: ape condenó al concilio de Calcedonia, aunque muy legí
nas se pueden citar de esto uno ó dos ejemplos ; no timo; pronunció anatema contra el papá S. León; hizo
asesinaron á los sacerdotes de los ídolos, ni obligaron maltratar á sus legados y á todos los obispos que no
á los paganos á frecuentar las reuniones cristianas ni quisieron ponerse de su parte. V. EUTIQUIANismo.
á hacerse bautizar. No los echaron de las ciudades ni
despojaron de sus bienes; no se apoderaron por vio Conciliadores (teólogos). V. sYNcRE—
TISTAS.
lencia de los caudales ni de los edificios que habian
pertenecido á los idólatras.
Juliano, despues de haber renunciado al cristianis Conciulo. Reunion de los prelados de la Igle
mo, hizo de nuevo dominante al paganisnio: sin em sia para decidir las cuestiones que pertenecen á la
bargo, los cristianos no le presentaron memorias en fé, á las costumbres ó á la disciplina. Se llama con
el estilo de las que los calvinistas dirigieron á Enri cilio general ó ecuménico el que está compuesto de
que IV despues de su conversion; no trataron de inti todos los obispos de la Iglesia ; concilio nacional el
Inidarle con amenazas, no intentaron aliarse con los que está formado por los obispos de una sola nacion;
príncipes estranjeros; no introdujeron tropas enemi concilio provincial el que se celebra por un metro
gas en el imperio; no se apoderaron de las rentas del politano con los obispos de su provincia
fisco para mantenerlas. No entregaron á los persas Sobre este importante objeto tenemos que ecsami
ninguna de las plazas fronterizas, ni formaron el pro nar: 1 º En qué consiste la autoridad de los concilios
yecto de establecer una república en el seno de la generales en materia de dogma. 2." Si esta autoridad
monarquia; los soldados cristianos continuaron sir es la misma en materia de disciplina, 3.º Lo que se
viendo en los ejércitos romanos con tanta fidelidad necesita para que un concilio sea tenido por general,
como antes. Ningun decrelo de los concilios ha man y cuántos concilios generales ha habido. ...º Quién
dado nunca ni permitido á los cristianos recurrir á la liene el derecho de convocarlos, de asistir á ellos con
fuerza y á las vias de hecho bajo el prelesto de ha— voto deliberativo, de presidirlos y confirmarlos. 5."
cerse justicia; asi nunca han tenido necesidad de edic Responderemos á las objeciones de los herejes contra
tos de abolicion, de amnistia, ni de perdon de sus re la autoridad de los concilios.
beliones pasadas. l. De la autoridad de los concilios generales en ma
Lo mismo sucedió cuando algunos emperadorse se teria de fé.
declararon protectores del arrianismo. Muchos obis Es evidente que un concilio al que han sido invi
os católicos fueron depuestos, desterrados, encarce lados lodos los prelados de la Iglesia universal, que es
ados, atormentados, pero ninguno predicó la rebelion presidido por el romano pontífice ó por sus legados,
á sus ovejas; muchos rehusaron entregar de buena confirmado por su autoridad, es la voz de la iglesia
voluntad las iglesias á los arrianos, pero no formaron católica, á la que todos los fieles, sin escepcion, estan
ningun atentado contra la autoridad civil. Los pue obligados á someterse. La Iglesia no puede profesar
blos no estuvieron menos sumisos á los nuevos con su creencia de un modo mas auténtico y mas solem -
quistadores bárbaros, que lo habian sido á sus anti ne que por la voz de sus prelados juntos y reuni
gunos señores. En los siglos siguientes los misioneros dos á su gefe. El que rehuse conformarse con esta en
que fueron á predicar el cristianismo á los infieles, lo señanza es herege y deja de ser miembro de la Igle
establecieron por la instruccion, por la persuasion, sia de Jesucristo.
or el ascendiente de sus virtudes y no por la vio En efecto, Jesucristo dijo á sus apóstoles: «Ro
encia ; los protestantes han hecho vanos esfuerzos garé á mi Padre, y os enviará otro parácleto (abo
para denigrar el celo y los trabajos de estos hombres gado, consolador, defensor) á fin de que quede con
apostólicos. vosotros para siempre». Joan, c. 1, 3.16. «El espí
Al Contrario, los escesos de los calvinistas estan ritu Santo, Paraclelo que mi padre enviará en mi
consignados no solo en nuestra historia, sino en los nombre, os enseñará todo lo que yo os he dicho».
fastos de las naciones que nos rodean , , han sido los y 26. «Cuando este Espíritu de la verdad haya ve
mismos en Francia, en Suiza, Qn Holanda, en Ingla nido, os enseñará toda verdad». c. 16, y 13. «S. Pa
terra y en Escocia. No se han establecido en ninguna blo nos advirtió, que Dios ha dado á su Iglesia pas—
parte sin derramar sangre; este era el espíritu del toresd doctores, á fin de que no seamos como ni
fundador de su secla; todos los crímenes que se han los, fluctuantes y arrebalados por todo viento de
permlido han sido justificados y consagrados por los doctrina, por la malicia de los hombres y por las
decretos de sus sínodos y por los escritos de sus teó astucias del error que nos rodea». Efes. c., y. 11.
logos. - «El que conoce á Dios, dice S. Juan, nos oye; el que
no es de Dios, no nos escucha; por esto es por lo
Conciliábulo. Reunion tenida por los hereges que conocemos el espíritu de verdad y el de el er
ó por los cismáticos contra las reglas de la disciplina ror». Joan. c. , y . 6.
de la lglesia; los arrianos, los novacianos, los dona— Si hubiese duda en cuanto al verdadero sentido de
tistas, los nestorianos, los eutiquianos y demas secta estos pasajes, la hubiera quilado la conducta de los
rios han formado muchas, en las que han establecido apóstoles. Cuando fué necesario decidir si los gentiles
sus errores y han hecho estallar su odio contra la convertidos al cristianismo estaban o no obligados á
glesia católica. El mas célebre de estos falsos conci— observar las ceremonias de la ley mosáica, los após
lios, es el que se ha llamado el latrocinio de Efeso ce toles y los sacerdotes que se hallaban en Jerusalen
lebrado en esta ciudad por Dioscoro, patriarca de se reunieron, y despues que cada uno dió su parecer,
Alejandria, al frente de los partidarios de Eutiques; decidieron la cuestion y dijeron: «Nos ha parecido
 CON 461 ) (CON

bien al Espíritu Santo y á nosotros no imponeros mas contra Nestorio que Maria es verdaderamente Madre
¿ lo que es necesario, á saber: que os abstengais de Dios, este dogma no es mas que una consecuencia
e las carnes inmoladas á los ídolos, de la sangre, de inmediata de la divinidad de Jesucristo reconocida y
las carnes sofocadas, de la fornicacion; hareis muy profesada por el concilio de Nicea. Lo mismo debe
bien en guardaros». Act., c. 15, y. 29. Quisieron que mos discurrir en cuanto á los demas concilios que han
los fieles tuviesen este decreto como un oráculo del decidido sucesivamente dogmas disputados por los no
Espíritu Santo. vadores. - - -

Para evadir las consecuencias han objetado los he «Qué ha hecho la Iglesia por sus concilios, dice
terodoxos: 1."Que esta reunion de algunos apóstoles con este motivo Vicente Lirinense, Commonit., ca
to era un concilio general, sino el sínodo de una Igle pítulo 23? Ha querido que lo que ya era simplemente
sia particular. 2." Que en efecto el Espíritu Santo, creido se profesase mas esactamente; que lo que ya
descendiendo sobre Cornelio y sobre toda su familia, estaba predicado sin mucha atencion se enseñase con
habia ya decidido que los gentiles estaban justificados mayor cuidado, que se esplicase mas distintamente lo
por la fé sin hallarse sujetos á las ceremonias mosái qne antes se trataba con entera seguridad. Siempre
cas; S. Pedro habia sido testigo de esto; evidentemen ha sido este su designio. No ha hecho, pues, con los
te entendia esto cuando dijo: «Ha parecido bien al Es decretos de los concilios mas que reducir á escrito lo
píritu Santo y á nosotros». que los antiguos habian recibido y a por tradicion. Es
Todas son falsas reflexiones. La asamblea no se propio de los católicos guardar el depósito de los san
componia solo de los pastores de la Iglesia de Jerusa tos PP. y desechar las novedades profanas como quie
len, puesto no solo S. Pedro y Santiago el menor, re S. Pablo», Quid unquán aliud conciliorum decre
sino S. Pablo y S. Bernabé, que se hallaban alli tis eniaca est (Ecclesia), misi ut quod anteá simpliciter
dieron su sutragio, y es muy probable que el Judas credebatur, hoc idem posteá diligentitis crederetur;
de quien se habla allí sea el apostol S. Judas. Se tra quod antea lentiús praedicabatur, hoc iden posteá ll S
taba de una cuestion que era á la vez de dogma y de tantiús praedicaretur: quod anteá securiis colebatur
práctica, y de hacer una ley general para toda la hoc iden posteá solicitiús ercolereturº hoc inuam
Iglesia; no era, pues, asunto de un sínodo particular. semper, neque quidquam praetercá, ha reticorum no
En segundº lugar, el Espíritu Santo, descendiendo so citatibus eaccitata, conciliorum decretis catholica per
bre Cornelio, no habia decidido que los gentiles estu fecit Ecclesia, nisiut quod priüs á majoribus sola tra
viesen obligados á abstenerse de las carnes inmoladas, ditione susceperat, hoc deinde posteris etiam per scrip;
de la sangre y de las carnes sofocadas, sin embargo, ture chirographum consignaret.;... ¡Oh Timothal
esto es lo que manda el concilio. En tercer lugar se inquis apostolus, depositum custodi, divitans profanas
ria muy ridículo unir el juicio de la asamblea al del vocum novitates. - -

Espritu Santo, sino hubiese estado persuadida que el
mismo Espíritu Santo presidia en ella. Pero como sos
tienen los protestantes que cada fiel debe regular él
mismo su fe por la Sagrada Escritura, no pueden to—
lerar la decision del concilio de Jerusalen.
Es cierto que los concilios generales han creado
nuevos dogmás, nuevos artículos de fé, como preten
den los enemigos de la Iglesia? No tendria lugar este
cargo si consibiesen en qué consiste el juicio que dan
los obispos reunidos en concilio. Estos son otros tan
los testigos con carácter y mision para atestiguar cuál es hereje si persevera en su error... .
A la verdad, antes que un dogma se haya decidido
solemnemente por un concilio ha podido perdonársele
á un teólogo el desconocerlo; ha podido ignorar cuál
era sobre este punto la creencia de la Iglesia católica,
desde que no tenia todavia una declaracion solemne;
ha podido engañarse inocenlemente sobre el sentido
que daba á los pasajes de la Escritura que le parecian
favorecer su opinión. Pero cuando la Iglesia ha ha
blado por medio de sus pastores no es perdonable un
hombre que prefiere su propiojuicio al de la Iglesia:
- -

es la creencia de la Iglesia particular que cada uno Dedúcese de lo mismo que la decision de un concilio
preside. Cuando trescientos diez y ocho obispos, ren general no es absolutamente necesaria para que un
nidos en Nicea el año 325, decidieron que el Verbo dogma sea considerado como perteneciente á la fé
Divino es consustancial á su Padre, y que asi Jesu católica. Basta que haya una certeza suficiente de
cristo es un solo Dios con el Padre, ¿qué hicieron? que tal es la creencia de la Iglesia universal. Cuando
Alestiguaron que tal era y habia sido siempre la se ha decidido un dogma por un rescripto del sobera
creencia de sus Iglesias Estos testimonios reunidos y no pontífice dirigido á toda la Iglesia, y que ha sido
comparados demostraron que tal era la fé de la Igle recibido sin reclamacion por el mayor número de los
sia universal. Hlolden de resolut. fidei, l. 1, c. 9. Para obispos, ya no se puede dudar que es la creencia de
definir lo que se debia creer, los PP. se limitaron á de la Iglesia católica. Si el juicio de la lglesia dispersa
cir: nosotros creemos. tiene menos publicidad que el de la Iglesia reunida,
No es, pues, cierto que hayan creado un nuevo por esto no tiene menos peso ni autoridad, no está
dogma; alestiguaron al contrario y juzgaron que la menos obligado todo fiel á conformarse con él V. ca
doctrina de Arrio era nueva é inaudita; que 'Arrio TOLICIDAD. - • - -

era un novador y un hereje, que pervertia el sentido Cuanto mas estensa es la Iglesia, tanto mas dificil
de las palabras de la Escrítura por las que queria es es reunir los concilios generales.
tablecer su opinion. II Estamos tambien obligados á somete nos á los
Lo mismo sucedió en 381 cuando el concilio gene— cánones de un concilio general en materia de disciplina
ral de Constantinopla decidió la divinidad del Espíri como á sus decisiones en materia de fé? Hay que hacer
tu Santo, que no se habia puesto en cuestion en Ni una distincion: cuando un punto de disciplina puede
cea; en 31, cuando el concilio de Efeso pronunció interesar alorden civil, atentará las leyes particulares
TOMO . (5'.
 CON 462 CON
de uno ó de muchos reinos, la Iglesia, siempre atenta ques que sostenia que no habia mas que una sola na"
en respetar los derechos de los soberanos, nunca pien turaleza en Jesucristo. El 5." celebrado en Constan
sa oponer su autoridad á la de aquellos; pronuncia linopla en 553, condenó los tres capítulos ó tres es
con circunspeccion; espera que el tiempo y las cir critos que favorecian la doctrina de Nestorio. El 6.
cunstancias permitan la ejecucion de sus disposicio fue tambien celebrado en Constantinopla el año 680,
nes. Por estas sábias consideraciones gran parte de proscribió el error de los monotelitas que no admitian
las leyes de disciplina dadas en el concilio de Trento, mas que una sola voluntad en Jesucristo; este era un
á las que se habian opuesto al principio, han venido resto del eutiquianismo.
insensiblemente á formar parte de nuestro derecho En 787 se luvo el 7.” en Nicea contra los icono
público en virtud de las ordenanzas de nuestros re clastas ó destructores de las imágenes. El 8 º en Cons
y tºCuando
S. una disciplina indiferente al orden civil tantinopla el año 869; se condenó en él y se depuso á
- -

Focio: este fue el origen del cisina de los griegos.

puede interesar la éó las costumbres, la Iglesia usa Despues de esta época los concilios generales han sido
con firmeza de su autoridad. Asi condenó antigua celebrados en Occidente.
mente como cismáticos á los quatordecimanos que se Se cuenta el 9.” al de Lelran el año 1123; no hizo
obstinaban en celebrar la pascua con los judios el dia mas que cánones de disciplina. El 10, celebrado en el
1 de la luna de marzo; mandó celebrarla el domin mismo punto el año 1139, tuvo por objeto la reunion
go siguiente; le pareció esencial establecer uniformi de los griegos á la Iglesia romana. Arnaldo de Bres
dad en un rito que atestigua la resurreccion de Jesu cia, discípulo de Abelardo, fue condenado en él lo
cristo. Aunque la comunion bajo las dos especies fue mismo que los maniqueos llamados despues albigen—
se un punto de disciplina, el concilio de Trento no ses. El 11 reunido tambien en Letran el año 1179,
quiso concederla a los que la pedian, porque los here reformó los abusos introducidos en la disciplina. El 13
jes sostenian falsamente su necesidad para la integri el año 1215 en el mismo punto, hizo una esposicion
dad del sacramento. Esta es una observacion en la de la doctrina católica contra los albigenses y los val
que los canonislas no han puesto siempre bastante denses.
alencion. - -

En el 13, celebrado en Leon el año 125, el papa

Los que se han atrevido á sostener que las decisio pronunció una sentencia de escomunion contra elem
nes de los concilios en materia de fé no tenian, fuerza perador Federico delante de Beaudonino, emperador
de ley mas que en virtud de la aceptacion de los so de Constantinopla. El 1 reunido tambien en Leon
beranos, ¿ se han engañado mas torpemente, en 127, trabajó de nuevo en la reunion de los grie—
Estas decisiones obligaron á todos los fieles en virtud gos y formuló una profesion de fe que firmaron. El 15
del mandato de Jesucristo: «Id á enseñad á todas las
fue celebrado en 1311 en Viena, en el Delfinado, para
naciones ... El que no crea se condenará». Mat., ca la estincion de la Orden de los Templarios; condenó
pítulo 28, y. 19. Marc., c. 16, y 16. Esta ley com los errores de los begardos y beguinos. En Francia
prende tanto á los soberanos como á los pueblos. contamos por 16 concilio general el de Constanza, ce
III. ¿Qué se necesita para que un concilio sea te lebrado en 11 para estinguir el gran cisma de Oc
nido por general, y cuántos ha habido desde el naci cidente causado por la pretencion de muchas personas
mienio de la Iglesia? Convienen unánimemente los al pontificado; concilio en el que Juan de Ilus y Ge
teólogos católicos que un concilio no se considera co rónimo de Praga fueron condenados y entregados al
mo ecuménico ó general, á menos que no hayan sido suplicio. Véase coNsTANzA. Por 17 el de Basilea
invitados en cuanto es posible todos los obispos de la en 1431, cuyo principal objeto era la reunion de los
cristiandad, y que pueda permitirlo la dislancia de los griegos; pero habiéndole el pontífice trasladado á
lugares. Hay sin embargo, muchos concilios á los que Ferrara en 138 y despues á Florencia en 1439,
no se han llamado mas que cierto número de obispos, muchos tuvieron este concilio de Florencia como ecu
pero que despues han sido reputados como generales, ménico, los griegos firmaron en él una profesion de fé
porque sus decisiones han sido recibidas, en toda la con los latinos. El 18 y el último concilio general es
iglesia y han adquirido la misma autoridad que las el de Trento empezado en el año 1545, y concluido
de los concilios generales. Tambien ha habido muchos el año 1563 contra las herejias de Lutero y de Cal
á los que no han asistido mas que un pequeño número VIII ().
de obispos, y que por esto no han tenido menos auto Desde que lafé cristiana se ha establecido mas, desde
ridad. Hé aquí la lista de los concilios considerados que hay obisposen América, en China y en las índias,
como generales; hablaremos mas estensamente de ca se ha hecho mucho mas dificil que nunca el reunir los
da uno en un artículo particular. -
concilios generales.
El 1º es el de Nicea el año 325, en el que se deci IV. A quién pertenece convocar los concilios ge
dieron contra los arrianos la consustancialidad del nerales, presidirlos, asistirá ellos con voto delibera—
Verbo y la divinidad de Jesucristo. El 2." el de Cons livo? Es tambien un hecho no dispulado en la Igle
tantinopla en 381, que confirmó la fé de Nicea, pro sia católica que el derecho de convocar los conci
fesó la divinidad de Espíritu Santo contra los nace
lios generales pertenece al romano pontífice, como
donianos y condenó los apolinaristas. El 3." el de astor de la Iglesia universal. El saber si este privi—
Efeso en 31, decidió contra Nestorio que Maria egio le pertenece de derecho divino ó solamente de
es Madre de Dios y confirmó la condenacion de los derecho eclesiástico y en virtud de una posesion bien
elagianos hecha por el papa Zosimo. El º se cele establecida, es una cuestion que quizá no es tan im
¿ en Calcedonia en 51, confirmó el anatema lan portante como parece á primera vista. Prescindiendo
zado en Efeso contra Nestorio y condenó á Euti de toda pretension, es cierto que de derecho divino
 CON
463) CON
el soberano pontífice debe proveerá las necesidades ue asegura á todos los fieles que son verdaderamente
de la lglesia universal, en tanto que pueda y segun ¿ miradas como hechas por la Iglesia uni
las circunstancias. Jesucristo impuso la obligación á versal, á las que en consecuencia deben obediencia
S. Pedro y á sus sucesores cuando le dijo: Apacien y sumision. - -

ta mis corderos y mis ovejas. Si para ellos es una obli Se conviene unánimemente los únicos jueces
gacion divina, tambien es un derecho divino; se necesarios en un concilio general son los obispos; á
ria un absurdo que no tuviesen el derecho de hacer ellos, como pastores de la Iglesia, pertenece instruir
lo que Jesucristo les ha mandado? Si no tuviesen el
á los fieles y enseñar cuál es la verdadera doctrina
derecho de convocar los concilios generales, quién lo de Jesucristo. No obstante, ordinariamente se admi
tendria con preferencia?
Nada sirve á los protestantes ni á los demas ene— en en estas reuniones á los abades, los diputados de
los cabildos y los teólogos, y estos tienen por lo me
migos de la Santa Sede obietar que, durante los cinco nos voto consultivo; pero segun el uso actual no pue
ó seis primeros siglos no son los papas sino los empe den pretender el deliberativo si no se lo conceden los
radores los que han convocado los concilios; que mas obispos.
de una vez los mismos pontífices se han dirigido á los
emperadores para pedirles esta convocacion. Las cir V. Qjeciones de los protestantes. Bien se compren
cunstancias lo exigian asi, y no se deduce nada con de que los protestantes condenados por el concilio de
tra el orden establecido por Jesucristo. En aquellos Trento no podian dejar de levantarse contra la au
tiempos la Iglesia cristiana no se estendia nada fuera toridad de todos los concilios, y de esforzarse en de
de los límites del imperio romano; era, pues, natural primirla; no han despreciado nada para salir con su
ue los emperadores hechos cristianos tuvieran cui intento. Pero como ellos mismos han celebrado síno
io de convocar los concilios, puesto que solo ellos dos, á cuyas decisiones han dado fuerza de ley, casi
no hay uno de sus argumentos que no pueda volverse
podian sufragar los gastos. Casi todos los obispos eran contra ellos, y que en efecto no lo haya sido por los
sus súbditos, y estos obispos, casi todos pobres, no se arminianos
hallaban en estado de viajar á sus espensas de una NIANOS. contra el sínodo de Drodrecht. V. ARMI
-

estremidad á otra del imperio. Tenian necesidad del

auxilio de los carruajes públicos, y esto dependia del Dicen: 1.º Jesucristo ni los apóstoles no han man
obierno. Pero antes de la conversion de Constantino dado celebrar concilios. Si estas asambleas fuesen ne
¿ habido cerca de cuarenta concilios particulares, cesarias, no se hubiese esperado hasta el año 323
de los que muchos habian sido numerosos; sin duda antes de tener una. Durante los siglos II y III se ha—
que no habian sido convocados por los emperadores bian levantado muchas heregias que atacaban los dog
paganos, y no se habia creido tener necesidad de su mas mas esenciales del cristianismo: los ebionitas,
autoridad para dar fuerza de ley á las decisiones que los cerintios, los gnósticos, los marcionitas, los ma—
en ellos se habian dado. Desde que la fé cristiana se niqueos, elc, habian aparecido; no se creyó que hu—
ha estendido en muchos reinos diferentes, y que biese necesidad de un concilio ecuménico para sofocar
hay obispos en las cuatro partes del mundo, ningun sus errores, ó mas bien, se conoció que este medio no
soberano tiene derecho de convocar á los que no son bastaria ni produciria ningun efecto; que era nece
sus súbditos. Ha sido, pues, necesario que el soberano sario terminar las disputas en materia de fé, única
pontífice, como cabeza de la Iglesia universal, con mente por la Sagrada Escritura. El concilio de Nicea
vocase los concilios generales, tuviese el derecho de fue un efecto de la política de Constantino, y todo
presidirlos y dirigir sus decisiones á toda la Iglesia. pasó en él por su autoridad; las decisiones no tuvieron
No ha sido, pues, un efecto de la condescendencia de mas fuerza que la que él les dió.
los soberanos, ni una libre cesion de parte de los obisRespuesta. Es evidente que bajo el reinado de
pos, sino una consecuencia necesaria de la estension los emperadores paganos no era posible celebrar un
actual de la Iglesia; y esto es lo que demuestra la sa— concilio general; esto hubiera sido un motivo para es—
biduria de Jesucristo, cuando dió á S. Pedro y á citar una persecucion contra los obispos que ya eran
sus sucesores un poder de jurisdicion sobre la Igle el principal objeto del aborrecimiento de los paganos.
sia entera. Licinio habia prohibido espresamente á los obispos
Por lo mismo, siempre ¿ el soberano Pontífice reunirse. ¿ cida de Constant., l. 1; c. 51. No
ha asistido á un concilio nadie le ha disputado el de es menos evidente que no se habria podido celebrar
recho de presidirlo; pero como los primeros concilios uno bajo el reinado de Constantino, si este príncipe
no hubiera contribuido á ello con todo su poder; pero
generales han sido celebrados en Oriente y muy lejos habia
de Roma, uno de los ¿ del Oriente ha sido habido concilios particulares. No solo hemos
ordinariamente el que ha ocupado el primer lugar, probado que la asamblea celebrada en Jerusalen há
y de lo que nada se deduce contra los derechos de la cia el año 51 era un verdadero concilio, en el que fue
Santa Sede. condenado el error, sostenido despues por los ebioni
En cuanto al derecho de confirmar los decretos de tas, sino que conocemos muchos de estos celebrados
los concilios generales, es una cuestion debatida entre tanto en Oriente como en Occidente, para condenar
los teólogos francesesé italianos. Segun nuestras mác— diferentes heregias. Los que se llaman cánones de los
simas, los decretos de un concilio general tienen fuer apóstoles, no son mas que los decretos de los concilios
za de ley independientemente de la aceptacion y de de los siglos II y III, y estos cánones condenan al
menos indirectamente á los marcionitas y maniqueos
la confirmacion del soberano Pontífice: la bula que y pronuncian penas contra los hereges.
dá con este motivo no es considerada sino como un
testimonio de su adhesion á estos decretos, por la No concebimos cómo las disputas con respecto á la
 CON 46%) CON

fé puedan lerminarse por solo la Escritura, mientras bido siempre entre los obispos diversos grados de ju
que precisamente tienen por objeto el saber cuál es el risdicion. V. Obispo, GobierNo, GERARQUIA, PAsroR.
verdadero sentido de la Escritura. No hoy una sola 3. No hay, dicen nuestros adversarios, ninguna
secta de herejes que no haya alegado en su favoral señal cierta para distinguir si un concilio ha sido ó no
gunos pasajes de la Escritura, y tampoco hay ningu— general, por consiguiente infalible; sobre este punto
na á la que la Iglesia no haya opuesto otros pasajes; todavia no se ha disipado la duda con respecto á los
si no hay ningun tribunal que tenga autoridad para concilios de Basilea y de Florencia, y el de Trento no
decidir, ¿de qué modo acabará la disputa? ha sido mas universal que los demas. Algunas veces
Convenimos en que un concilio general no es abso un concilio, que habia empezado siendo legítimo yecu
lulamente necesario para proscribir y sofocar una he ménico, ha dejado de serlo en el curso de las sesiones,
rejia, puesto que la autoridad de la Iglesia dispersa ¿Cómo distinguir cuáles son los decretos que tienen ó
no es menos que la de la Iglesia congregada; pero es no fuerza de ley? Antes de someterse á ellos, es nece
útil porque demuestra con mas pronlitud y de un mo sario saber si un concilio ha sido legítima y universal
do mas sensible cuál es la creencia universal de la Igle mente convocado, si ha habido libertad de sufragios,
sia. Los Rnismos prolestantes han celebrado no solo si han sido unánimes, si han sido dictados por alguna
sínodos particulares, sino nacionales; se proponian pasion, por ignorancia ó por prevencion, etc. ¿Quién
tener en Dordrecht un sínodo general de todas las nos dará sobre todos estos puntos un testimonio en el
Iglesias reformadas, todas habian sido invitadas; hi que nos podamos fiar?
cieron en esta asamblea decisiones de fé, pronuncia Respuesta. Si los protestantes hubiesen hecho to
ron escomuniunes, é hicieron apoyar los decretos con das estas objeciones contra sus sínodos antes de adop
el brazo secular. Estos doctores sin mision y sin ca tarsus decisiones, quisiéramos saber lo que hubieran
rácter han tenido una autoridad mas legítima y mas respondido sus dectores; pero sabemos cómo han sido
respetable que los sucesores de los apóstoles. tralados los arminianos, que en efecto las hicieron con
Es falso que el concilio de Nicea, en sus decretos tra el sínodo de Dordrecht. Sin duda que lo habia ol
relativos a fé y disciplina, haya procedido por vidado Basnage, cuando se ha propuesto argumentar
autoridad de Constantino; este mismo príncipe de contra los concilios de la Iglesia romana. Historia de
claró en plena asamblea que dejaba á los obispos el , la Iglesia, l. 10, c. 1 y sig; l. 26, c. .
cuidado de estos objetos; Socrates, Hist. eccles. 1, Es necesario que los caracteres de un concilio ecu
c. 8. Pero castigó con justicia con el destierro á los ménico no sean tan difíciles de comprobar como pre
que rehusaron someterse á la decicion del concilio. tende, puesto que entre los diez y ocho concilios gene
2." Estas asambleas, segun los protestantes, han rales no hay mas que dos sobre los que se disputa
cambiado la forma primitiva del gobierno de la Igle entre, los teólogos católicos. Todos convienen que
sia, y han privado al pueblo del derecho de sufragio cuando un concilio ha sido convocado por el soberano
que debia tener en las deliberaciones. Los obispos, que pontífice ó con su consentimiento, cuando ha sido ge
hasta entonces se habian, considerado como simples neral esta convocacion, que ha sido confirmada por su
dipulados ó mandalarios de las Iglesias, pretendieron aquiesciencia y por la aceptacion de toda la lglesia,
ue habian recibido de Jesucristo el derecho y el po— no hay ya que tener ninguna duda sobre la autoridad
¿ de hacer leyes relativas á la fé y las costumbres, de sus decretos. Las disputas que puedan suscitar so—
de imponerlas á los fieles sin consultarlos. De aqui bre esto los herejes que han sido condenados, no me
han venido despues los honores, las prerogativas, la recen ninguna consideracion; la Iglesia católica no
que los obispos de las ciudades principa— les ha tenido ningun miramiento. ¿Dónde se ha visto
es se han atribuido sobre sus colegas. que litigantes pertinaces convengan en la justicia de
Respuesta. La falsedad de todas estas aserciones una sentencia pronunciada contra ellos? -

está probada por monumentos incontestables En el ...” Pretende Basnage que los mismos concilios no
concilio de Jerusalen los apóstoles no consultaron al se han creido infalibles; los obispos reunidos en Nicea
pueblo; al contrario, se dice que la multitud guardó si no tuvieron tan grande opinion de sus decretos; cuan
lencio; tacuit omnis multitudo; el decreto se formó do los arrianos rehusaron someterse á ellos, no se les
en nombre de los apóstoles y de los sacerdotes sin ha opuso la autoridad del Espíritu Santo que los habia
cer mencion del pueblo, apostoli et seniores fratres. presidido. Al contrario, se creyó que la dicision de
El pueblo de una ciudad en la que se reunia un conci Nicea tenia necesidad de ser confirmada, y lo fue en
lio tenian el derecho de subyugar con su sufragio á efecto en el concilio de Sardica el año 37; pero los
los obispos de otras iglesias, ó imponer leyes á los fie obispos reunidos de nuevo en Rimini y en Seleucia en
les de otras ciudades? Los mismos protestantes en sus 359 la revocaron y la cambiaron: en consecuencia, la
sínodos nunca han consullado al pueblo; siempre han sido necesario renovarla en el segundo concilio gene—
pretendido que el pueblo estaba obligado á someterse ral celebrado en Constantinopla en 381. No hay uno
a sus decisiones bajo pretesto de que estaban fundadas solo cuyos decretos no se hayan sujetado á revision.
en la Sagrada Escritura; asi ellos se han atribuido la Asi pensaba S. Agustin, puesto que dice que los pri
autoridad que disputaban á los prelados de la Iglesia meros pueden corregirse por los concilios posteriores.
católica; El pretendido derecho de sufragio, que atri Unicamente en los últimos siglos es cuando se ha tra
buian al pueblo en sus escritos, no es mas que un me lado de considerarlos como infalibles.
dio del que se han valido para engañarle. Dennostra Respuesta. Los concilios genera"es se han creido
remos en su lugar que los obispos nunca han sido de la modo infalibles y revestidos con la autoridad
simples mandalarios de sus iglesias, que el gobierno del mismo Jesucristo, que han declararado herejes, es
eclesiástico no ha sido nunca democrático, que ha ha— comulgados é indignos del nombre de cristianos á to
 CON 465 -
QON
dos los que se han rebelado contra sus decretos. Cuan y no hay ninguna razon para tener á este por me—
do han hecho lo inismo los concilios particulares, han nos ecuménico ó menos legítimo que el 1.º. El 5."
presumido que sus decisiones serian adoptadas por concilio reunido en Constantinopla condenó los tres
toda la Iglesia, y adquiririan asi la misma autoridad capítulos que el de Calcedonia habia aprobado. En
que la de los concilios generales. El concilio de Efeso, 879, otro concilio de Constantinopla anuló los ac—
art. 3 y 6, el de Calcedonia, art. 5, declaran que su tos del que habia condenado á Focio diez años antes.
juicio es sin apelacion é irreformable. ¿Qué mas po— El concilio de Trento ha declarado canónicos los li
dian decir? Cuando la Iglesia ha tolerado que seme— bros que los antiguos concilios habian desechado co
jante juicio fuese ecsaminado de nuevo, ha querido mo apócrifos.
demostrar, que llevaba la condescendencia y la cari Respuesta. Estas son otras tantas falsedades. Es
dad con sus hijos rebeldes hasta el esceso; que no re— absurdo darnos por concilio ecuménico la reunion
husaba oir sus razones; que no queria dejarles nin que tuvo Dioscoro á la cabeza de los eutiquianos en
gun motivo ni pretesto de quejarse, y de esto nada se 9, y que se ha llamado con justos títulos el la
deduce. Pero tal es el genio malicioso de los hereges,
trocinio de Efeso. No lo es menos alegar como prue—
cuando se ecsige que se sometan sin discusion á la ba las calumnias que estos herejes publicaron con
sentencia pronunciada una vez, se quejan de que ni tra las decisiones del concilio de Calcedonia para es
aun se dignan escucharlos; cuando se consiente en— tablecer sus errores. Es falso que este concilio haya
trar con ellos en un nuevo ecsámen, deducen de esto, favorecido de algun modo la doctrina de Nestorio, y
que bien se ha conocido la insuficiencia del primero. que aprobase los tres capítulos; lo es que el de Cons
Si antes de admitirlos á él, se ecsigiese de ellos una tantinopla haya anulado los actos del precedente. To—
promesa solemne de acceder á la segunda decision, dos estos hechos se ilustrarán cada uno en su lugar.
rehusarian hacerla ó la quebrantarian. Véase EFeso, CALCEDoNIA, EUTIQUIANIsMo , NEsto—
Qué hicieron los arrianos despues del concilio de RIANISMo, GRIEGos, etc. El concilio de Trento ha
Nicea? No se atrevieron á defender que la doctrina declarado canónicos, libros que los antiguos concilios
de esta asamblea fue falsa ó contraria á la de los após. no habian colocado en el canon, pero que no ha
toles, ni enseñar una enteramente opuesta en sus pro bian desechado ni como falsos ni como apócrifos.
fesiones de fé; se limitaron á pretender que la palabra V. CANON.
consustancial introducida en el símbolo de Nicea, era 6 º No hay, dicen todavia los protestantes y sus
susceptible de un mal sentido, y podia dar lugará copistas, ningun concilio, ya antiguo ya moderno,
consecuencias erróneas; redactaron fórmulas en las que haya producido los efectos que se esperaban de
que, suprimiendo esta palabra, pretendian estable— él. Estas asambleas, lejos de terminar las disputas,
cer en el fondo la misma doctrina, y para hacerlas las hacian mas violentas; han exasperado el mal en
adoptar pedian sin cesar nuevos concilios. Cuando lugar de remediarlo. El concilio de Nicea no hizo
llegaron á hacerse dueños en algunos, como en Rími mas que suscitar nuevos partidarios al arrianismo y
ni, y en Seleucia, á intimidar y subyugar á los obis llenar la Iglesia de disturbios durante mas de un si
pos católicos, se quitaron la máscara, y profesaron el glo. El de Constantinopla no ahogó los errores de Ma
arrianismo puro. V. ARRIANismo. cedonio ; el de Efeso ocasionó el cisma de los nesto
Basta leer entero el pasage de S., Agustin para ver rianos y el de Calcedonia el cisma de los entiquianos.
lo que ha querido decir. Dice que los concilios plenos El 7.º, con respecto al culto de las imágenes, fue
ó generales son muchas veces corregidos por conci— desechado en Francia y en Alemania durante mas de
lios posteriores, cuando se descubre por esperiencia lo un siglo, y el 8º ha sido el origen del cisma de los
que antes habia estado oculto, y se conoce lo que griegos. Por último el de Trento no ha podido atraer
antes era desconocido, l. 2 de Bapt. contra Donat., á la Iglesia ninguna de las sectas que se hahian sepa
c. 3. ¿Es en materia de fé donde se puede descubrir parado de ella. -

por esperiencia lo que antes era desconocido? La Igle. Respuesta. A qué debemos atenernos? Es singular
sia no ha tenido nunca necesidad de concilio, para que los herejes se prevalgan de su terquedad para
saber lo que los apóstoles le habian enseñado. Es probar la inutilidad de los concilios. Todos han em
en materia de hechos personales ú otros en pezado por pedir uno en el que su doctrina fuese ec
os que esto puede suceder; asi convenimos en que saminada: cuando han sido condenados han decla
sobre tales hechos las decisiones de un concilio no mado contra la decision. Esto demuestra que todos
son infalibles. Por otro lado, S. Agustin escribia en - han obrado de mala fé, que estaban bien resueltos
tonces contra los donatislas, y toda la disputa que á no aquietarse con ningun juicio á menos que no lo
habia entre ellos y la Iglesia no tenia mas objeto que hubiesen dictado ellos mismos. Pero el sínodo de Dor
un hecho. W. DoNATIsTAs. drecht reunido por los calvinistas con tanto aparato,
Los protestantes han hecho todavia mas que los ¿ha convertido á los arminianos? Subsiste su secta y
arrianos: al mismo tiempo que defendian con todas ha hecho nuevos partidarios á despecho de la conde
sus fuerzas que ninguna decision humana es infali nacion; la de los gomaritas no ha prevalecido sino
ble, ecsigían para los decretos de sus sínodos la mis por el apoyo del brazo secular. Antes de censurar
ma sumision que si hubieran sido los oráculos del con tanta acritud los concilios de la Iglesia católica,
mismo Dios. debian los protestantes haber pasado la vista por lo
5.° Dicen que muchos concilios generales se han que sucede entre ellos,
opuesto unos á otros. La doctrina de ¿ conde
- -

¿Qué consecuencia pueden deducir de esto los in

nada en Efeso fue acreditada en Calcedonia; asi lo crédulos de hoy dia? Que los herejes son inconven
juzgó el segundo concilio celebrado en Efeso en 49, cibles; que la Iglesia ha hecho sus esfuerzos en vano
 CON (66) CON
para atraerlos á la enmienda; que la obligan por úl- de Jesucristo y de los apóstoles. Hist. ecles. siglo V,
timo á echarlos enteramente de su seno como miem 2" parte, c, 3, S.8 y 9.
bros podridos y capaces de infectar á los demas. No Respuesta. En este como en otros muchos luga
es, pues, inutil el anatema que pronuncia contra ellos res, este crítico ha sido cegado por el odio. Ha debi
pues sirve para distinguirá sus hijos de los rebeldes, do saber que en el cristianismo, para saber lo que es
y su doctrina de los errores. Los cisnas, las divisio verdaderó ó falso, no se trata de consultar la razon
nes, los odios que no dejan nunca de nacer aun en muy defectuosa y el pretendido buen sentido de los
- las mismas sectas que se han separado de ellos, prue filósofos, sino la revelacion y saber lo que ha sido ó
ban demasiado que tuvo razon en desembarazarse de no revelado. Asi este es un hecho que no puede com
ellos. probarse sino con el testimonio ó con la relacion de
7.” Es imposible, continuan los declamadores, que los antiguos. No hay pues que hacer ninguna compa—
el Espíritu Santo haya presidido á los concilios; eran racion entre los teólogos y los jurisconsultos.
reuniones tumultuosas en las que la pasion animaba ¿Qué responderia Mosheim á un incrédulo que le
igualmente á los dos partidos, en las que los obispos, dijese que el hábito de consultar los pretendidos libros
la mayor parte viciosos, no pensaban sino en hacer inspirados, mas bien que la razon y el buen sentido,
prevalecer sus opiniones y en satisfacer sus odios es el que ha dado lugar á los falsarios para forjar li
particulares. Nada hay más escandaloso que las es— bros bajo el nombre de Jesucristo y de los apóstoles?
cenas que han pasado en Efeso, en Constantinopla, Hé aquí como los protestantes caen siempre en sus
en Nicea y otras partes durante la celebracion de los mismas redes.
concilios. S. Gregorio Nacianceno estaba tan incomo 9." . Algunos incrédulos han pretendido que hay
dado de esto, que habia determinado no asistirá un medio por el que la corte de Roma puede corrom
ninguno; habla de ellos con el mayor desprecio; san per las actas de los concilios; han citado á un protes
Ambrosio pensaba lo mismo. Las disputas no fueron tante que dice que en la biblioteca del Vaticano hay
mas decorosas ni moderadas en el concilio de Trento escritores ocupados en transcribir las actas y las obras
qne en todos los demas. de los PP., imitando el carácter de los antiguos libros
Respuesta. . Convenimos en que en muchos de los con el fin de poder dar estas copias modernas por lí
antiguos concilios los herejes han levantado tumultos; tulos originales. Estas imposturas de los prolestantes
que muchas veces, á ejemplo de los arrianos, de Nes eran muy buenas para seducir á los pueblos en los
torio, de Dioscoro, se han hecho apoyar por solda dos últimos siglos, pero es bien ridículo repetirlas en
dos y han empleado la violencia para que prevalez el dia. La corte de Ro na alterará las ediciones de los
Can Sus errores. Pero es necesario no echar sobre los concilios y de los PP., impresas y esparcidas en una
obispos católicos los escesos de los seclarios. Cuando gran parte del universo? Las actas originales del con
S. Gregorio Nacianceno ha pintado un cuadro des— cilio de Basilea no se han trasportado á Roma; se ha
yentajoso delos concilios, hablaba de aquellos en que llan en la biblioteca de Basilea y de ellas hay una
los arrianos habian sido los señores y se habian pre copia auténtica en la biblioteca del rey.
valido del apoyo de los emperadores que los favore— Las actas de los concilios se han reunido por La
cian; escribia el año 377, y entonces habia habido vigne, é impreso en Louvre el año 164 en 37 vol.
al menos doce reuniones en las que estos herejes ha en folio: despnes por los PP, Labbe y Cossart, jesui
bian desplegado su genio violento y sedicióso; él tas, é impresas en Paris en 1672 en 17 vol.; por últi
mismo habia sido el blanco de sus maquinaciones mo por el P. Hardouino é impresas en Louvre en
cuando gobernaba la Iglesia de Constantinopla. San 1715 en 12 vol. la coleccion de Labbe se ha reimpre
Ambrosio hablaba de estos mismos tumultos y en el so, en Venecia en 1732 en 21 rol., y en Lucques en
º tiempo; pero no ha habido arrianos en todos 178 en 26 vol. Las actas de los concilios celebrados
0s concilios; muchos se han celebrado á la vista v en en Francia han sido dadas por el P. Sirmond y por
los palacios de los emperadores, y cuando estos eran su sobrino en vol.; las de los concilios de España
cristianos no han escitado ni sufrido ninguna disputa por Aguirre en vol.; las de los concilios de Ingla —
indecente. terra é Irlanda por Wilkins, é impresas en Londres
Puede haberlas habido entre los teólogos de dife en 1737 en vol. en folio. Discurso del P. Richard
rentes escuelas, que fueron enviados al concilio de que se halla á la cabeza del Análisis de los concilios
Trenlo; pero estas disputas nada han tenido de co— generales y particulares.
mun con las sesiones del concilio celebrado por los
obispos, en las que se redactaban las decisiones. Ha X& Concillos nacionales. Fórmanse estos
bia en Trento embajadores de todos los soberanos ca por la reunion de los obispos de todas ó casi todas las
tólicos; las disputas de los teólogos no tenian lugar provincias de un reino ó de un Estado. La antigüedad
mas que en las asambleas particulares; ningun des nos ofrece muchos ejemplos en los célebres concilios
orden, ningun tumulto hubo en las sesiones públicas. del Africa, de las Galias y de España. Fueron bas—
V. TRENTo. va
tante frecuentes en Francia durante la primera y se
8." Pretende Mosheim que los controversistas y gunda raza de nuestros reyes. Hubo despues algunos
los concilios siguieron el método de los jurisconsultos pero con menos frecuencia, y hace mucho tiempo que
de los tribunales romanos; que ecsaminaban mas no se han celebrado. Aunque son muy inferiores en
ien lo que habian pensado los antiguos, que lo que autoridad a los concilios generales, han inspirado
era conforme á la razon y al buen sentido. Esto, dice, siempre una gran veneracion, y sus decisiones son
es lo que dió lugar á impostores á publicar obras fal— de mucha importancia; lo cual se conoce por el res—
sas con nombre de autores los mas respetables, aun pelo que se ha manifestado en todos tiempos á sus de
 CON 467 CON
cretos, que hasta los mismos concilios generales adop el año de 53%, y el de París de 555, y el de Va
taron en algunas ocasiones. lencia en 58'.
La convocacion de estos concilios no se considera Pero sin embargo, al mismo tiempo se vió á Pro
que esté reservada á los papas. No hay vestigio al bo, arzobispo de Bourges, presidir en 557 el tercer
guno de esto en las actas de dichos concilios que ma— concilio de París; á Felipe, obispo de Viena, el se—
nifieste se haya necesitado el permiso de los soberanos gundo de Leon en 567; á Euronio de Tours el se—
pontífices, pues eran los patriarcas y los primados los gundo concilio de esta misma ciudad en el mismo año;
que hacian la convocacion con el consentimiento de los y Ancorico el de Auxere en 578.
príncipes cristianos, ya fuese espreso ó presunto; por El arzobispo de Leon goza en Francia el derecho
que este consentimiento siempre ha sido necesario pa de primacía ; y pretende como un privilegio de su
ra autorizar á los obispos á que se reuniesen en cuer silla el presidir los concilios nacionales. Los ejemplos
po. En Francia los soberanos mismos han convocado que acaban de citarse prueban que este privilegio
casi siempre los concilios nacionales del reino, y tie no pudo ecsistir hasta fin del siglo VI. Sin duda fue
nen este derecho incontestable, como protectores y el origen de la pretension de los arzobispos de Leon
defensores de los derechos, franquicias y libertades el haber presidido Prisco, obispo de esta dióce—
de la Iglesia y del reino (1); Casi todos los concilios sis, el segundo concilio de Macon en el año 585
cuyas actas se han conservado manifiestan que nues que se hallaron juntamente con él, ademas de los
tros reyes han ejercido esta potestad; casi todas re obispos los cinco metropolitanos de Viena, de Sens,
fieren que se han reunido de orden de los príncipes de Rouen, de Burdeos y de Bourges. Este concilio,
que gobernaban entonces el Estado, y á ninguno cier— que fue casi nacional, ordenó que cada cinco años
tamente mejor que al soberano podia pertenecer el de se tuviese otro, y que el obispo, metropolitano de
recho de convocar y reunir los obispos de sus do - Leon señalase el dia, despues de haber conve
minios. nido con el rey sobre el lugar de la reunion. Can
Con respecto á la presidencia en los concilios na— derico, obispo de Leon, presidió en 650 el conci
cionales, correspondia unas veces á la dignidad de las lio de Chalons, y esla es sin duda la causa de ha
sillas episcopales, cuando en la estension de las pro berse establecido insensiblemente el derecho de los
vincias donde los obispos se reunian habia algu— obispos de Leon, que desde aquel tiempo presidie
na que tuviese esa preferencia; y asi los patriar— ron muchas veces á los concilios nacionales. Sin em
cas presidian en su patriarcado; los exarcos, títu— bargo, su posesion ha sido interrumpida frecuen
lo que se daba á los obispos de Cesarea, en Capa— temente y nunca fue reconocida por las asambleas
docia, de Efeso y Heraclea presidian en sus exarca— del clero de Francia, á las que ó no quisieron
dos, y los primados presidian en el distrito de su asistir por este motivo los arzobispos de Leon, ó si
primacía; otras veces correspondia á los mas anti asistieron fue protestando la conservacion de sus
guos en la ordenacion, y algunas veces tenian la derechos. Si ocurriese la celebracion de algun con
residencia otros obispos en calidad de legados de cilio nccion al en el reino , habria alguna dificultad
a Santa Sede. Con este título le tuvieron por lar en convenir en la presidencia, porque ocurririan las
go tiempo los arzobispos de Arles, lo cual se acos pretensiones, al parecer legítimas, de todos los me
tumbraba mucho en los siglos XI, XII y XIII, des tropolitanos para presidir las reuniones eclesiásti-.
pues de los cuales volvieron á celebrarse como an— cas que se celebran en sus provincias, y acaso se
ieriormente los concilios nacionales sin la concur ria preciso recurrir á alguna disposicion provisio
rencia de los legados del papa. La presidencia se nal sin perjuicio de los derechos de cada uno para po
le concedia al mas antiguo de los metropolitanos en der proceder á las deliberaciones.
los primitivos tiempos; y este orden subsistió has Los concilios nacionales se forman, como los gene
ta, el tiempo en que los papas concedieron la cua rales, de las diputaciones de varias provincias ecle
lidad de legados de la Santa Sede á los arzobispos siásticas, dándoles sus respectivos poderes á los di
de Arlés, y como tales presidieron á los concilios putados. Lo que se ha dicho de los presbíteros con
nacionales. Sin embargo, durante el mismo tiempo motivo de los concilios generales, debe aplicarse
de la legacion se vió que presidieron igualmente otros igualmente aqui. Es bien sabido que los concilios na
obispos. El papa Simmaco concedió la legacion á San cionales pueden establecer decretos y definiciones so
Cesáreo, arzobispo de Arlés, en el año de 51 pa— bre la fé lo mismo que acerca de la disciplina; y
ra evitar las frecuentes disputas que se suscitaban solo basta leer las actas que nos quedan de los anti
con motivo de la presidencia entre los arzobispos de guos concilios celebrados en los primeros siglos de la
Viena y de Narbona; y luego fueron confirmados en Iglesia para conocerlo; mas los decretos que dan en
ella ápeticion de los reyes todos los sucesores de materias de fé no constituyen una regla invariable é
S. Cesáreo, segun se ve en las cartas que los papas infalible de nuestra creencia, si no son aceptados por
escribieron al mismo S. Cesáreo, Arcadio, Aure el consentimiento unánime de la lglesia, á lo menos
tácito, porque á ella solamente la pertenece declarar
liano, Sapando y á Vigilio, que todos se sucedieron
haproponerº los artículos de fé, v por este medio se
unos á otros en la silla de Arlés, y por un efecto
de la confirmacion de este privilegio presidió Sa sofocado y proscrito la mayor parte de las he
pando el segundo concilio de Arlés, celebrado en rejias. San Agustin no tuvo duda alguna en decir
que la causa de los pelagianos se debia dar por con
Derechos y franquicias de proteccion y amparo,mas no de cluida desde que Roma habia aprobado solemnemen
intervencion ni autoridad; y mucho menos de prelatura. Sicmpre
con las libertades de la Iglesia galicana, como si fuera indepen te y confirmado la condenacion pronunciada contra
diente de la de Roma, madre y maestra de todas las iglesias. ellos en los concilios de Africa, y que asi no debian
 CON 68 CON

pretender que se les oyese en un concilio general; creido deber indicar la época de la celebracion del
que no se debia turbar el reposo de todas las igle— prócsimo concilio, como sucedió en los concilios de
sias por la obstinacion de un corto número de hom Pisa, de Constanza y de Basilea, casi nunca se han
bres que estaban ya convencidos de su error, porque podido conciliar las circunstancias con esta indicacion.
en efecto, toda la Iglesia aplaudió la condenacion de La procsimidad de los obispos de una misma provin
los errores de Pelagio y Celestino. Por el contrario, cia ofrece menos dificultades para poderlos reunir,
aunque Arrio habia sido condenado en el concilio na y asi es que los concilios provinciales se celebraban
cional de Egipto, presidido por el patriarca de Ale muy á menudo; estaba dispuesto y casi en uso que
jandria, que la Santa Sede aprobó, los progresos que se celebrasen á lo menos una vez al año, segun se pre
habia hecho la impiedad arriana, el número de par— vino en el segundo cánon del concilio celebrado en
tidarios que tenia, y las discordias que ocurrian en Orleans el año 533, ut metropolitani singulis annis
toda la Iglesia , dieron márgen á que se creyese in comprovinciales sur ad concilium evocent; y se reno
dispensable la celebracion de un concilio general; y vó en el cánon tercero del tercer concilio celebrado el
con este motivo se convocó el primero y mas céle año despues en la misma ciudad: tambien se halla en
bre concilio general. las capitulares de Carlo—Magno, el cual mandó se eje
En cuanto á los reglamentos de disciplina hechos cutasen los cánones que habia sobre este punto; como
en los concilios nacionales, siempre han merecido tambien en el concilio celebrado en Savonieres el año
gran respeto, y la Iglesia frecuentemente los ha adop 839 decretaron que se les escitase á todos los sobe
tado é incorporado en sus códigos de cánones. Sin ranos, á fin de que empleasen su autoridad en con—
embargo, no tienen valor por sí mismos mas que en servar esta antigua y preciosa disciplina; pero des
la nacion donde se han celebrado, y no adquieren pues se resolvió que los concilios provinciales solo se
esta fuerza plenamente hasta ser aprobados por los celebrasen en cada tres años, cuya disposicion confir
príncipes y revestidos con el sello de la autoridad mó el concilio de Trento.
pública. Los concilios nacionales celebrados en Fran El edicto de Melun, artículo 1.”, al mismo tiempo
cia han conocido la importancia y necesidad de ser que manda se celebren con este intérvalo de tiempo
autorizados en esta forma, lo que se puede conocer segun la disciplina establecida, confirma igualmente
por el conato que han tenido en solicitarlo. Nuestros á los metropolilanos el derecho de convocarlos, di
reyes han manifestado mucho anhelo en mantener ciendo así: «amonestamos á los arzobispos y metro
con su autoridad todo cuanto los concilios habian dis politanos del reino, y les imponemos la obligacion de
puesto en beneficio público. (Estracto del Diccionario celebrar sus concilios provinciales en los seis meses
de Jurisprudencia). prócsimos, y en adelante cada tres años en el lugar
CONCILIOS PROVINCIALES. Despues de los con de sus provincias que les parezca mas propio y con -
cilios nacionales siguen por su autoridad los provin veniente al efecto, proveyendo lo conducente en cuan
ciales, es á saber, los que se forman reuniéndose los to á la disciplina y correccion de las costumbres, y á
obispos de una provincia eclesiástica bajo la presi la direccion de la policia eclesiástica é institucion de
dencia del metropolitano, y en el caso de estar va las escuelas, segun el tenor de los estatutos y decre
cante la silla, ó de haber un impedimento legítimo, tos, previniendo á todos nuestros jueces que no traten
le corresponde jure devoluto al mas antiguo de los de impedir directa ni indirectamente la celebra
obispos, á no ser que esté aneja á alguna otra silla cion de los referidos concilios, mandándoles que
or una costumbre ó estatuto particular. Cuanto se presten ausilio para la ejecucion de las ordenanzas y
¿ dicho acerca de los decretos en materias de fé y decretos de aquellos, sin que tengan efecto alguno
los reglamentos en materias de disciplina, es igual— suspensivo las apelaciones que se interpongan acerca
mente aplicable á los concilios provinciales. Los con de lo que se establezca en ellos para la correccion y
cilios provinciales pueden incontestablemente tratar ¿a eclesistica».
de ambas cosas, asi como los concilios nacionales por Las asambleas del clero de Francia posteriores á la
que no se les puede disputar este derecho, siendo asi de Melun han repelido siempre que sus deseos eran de
que cada obispo lo tiene en su diócesis; pero los de que tuviese una plena y entera ejecucion este artícu
cretos de estos concilios en materias de fé no tienen lo. La del año 1625 que presidió el cardenal de Sour
un carácter tan definitivo é irrevocable como los de dis resolvió la convocacion de los concilios provincia
los concilios nacionales. Los tales decretos son como les en la sesion del martes 3 de junio, conociendo que
provisionales, aunque de una autoridad bastante no habia medios mas póderosos para que se conser
respetable; pero no se consideran como una decision vase y mantuviese en todo su vigor la disciplina ecle
precisa y formal, ni tienen fuerza los reglamentos de siástica, y para que pudiesen mas útilmeule trabajar
disciplina fuera de los límites de su provincia ; y aun en ellos, qie recurriesen al rey, suplicándole con su
para esto es necesario que obtengan la aprobacion mision que concediese sus reales despachos con el fin
soberana, en lo que nunca se han descuidado los Pa de que los jueces ausiliasen la ejecucion de los de
dres de los últimos concilios provinciales que se han Crelos.
celebrado en Francia. Los mismos deseos manifestó la asamblea celebra—
Ahora nos resta saber en qué tiempo se debe cele da en Pontoise en el año de 1670, en la súplica que
brar, y á quién pertenece su convocacion. La dificul hizo al rey el jueves 2 de octubre. Mr. Le-Tellier,
tad de reunir todos los obispos del mundo cristiano y coadjutor de Reims que llevaba la voz del clero, pro
aun los de una sola nacion apenas ha permitido fijar puso la celebracion de los concilios provinciales como
una época determinada para la celebracion de los con el resumen de los medios que podian ser útiles para
cilios generales ó nacionales; y si alguna vez se ha que renaciese la disciplina en toda su pureza; despues
 CON 469) CON
de haber dicho que por medio de estas santas reunio cilios provinciales siempre han sido de mucha utilidad
nes habia florecido la fé en la Iglesia; que la regula y beneficio en la Iglesia para conservar la disciplina y
ridad y la disciplina habian triunfado de la licencia y reformar los costumbres; que la época de su celebra.
de la corrupcion, y las censuras habian corregido las cion es cada tres años; y por último, que los arzobis
malas costumbres del clero y del pueblo, suplicó ánom pos eslan igualmente autorizados y escitados por las
bre del clero se pusiese en ejecucion lo que las orde leyes eclesiasticas y civiles á convocar los concilios a
nanzas previenen. El sumario de la asamblea del año su debido tiempo; sin embargo de esto, parece muy
1700 presenta un discurso muy parecido en los mismos eslraño que se celebren tan rara vez. Este artículo es
términos que pronunció Mr. Enrique de Nesmond, obis del Sr. Remi. (Estracto del Diccionario de Jurispru
po de Monlauban Nuestros reyes han procurado fa dencia).
vorecer en este punto la observancia y ejecucion de la
disciplina antigua y los deseos del clero. Ya hemos Coneomitante. Se dice del ausilio de la gra
visto la disposicion del artículo primero de la orde cia que Dios nos concede durante una accion para
nanza de Melun, y ahora vanos á ver lo que dice el ayudarnos á continuarla y á concluirla. Se ha deci
artículo sesto de la asamblea del año 1610. «Para la dido contra los pelagianos que para cualquier obra
reforma de las costumbres y la direccion de la justi buena sobrenatural y meritoria tenemos necesidad
cia y disciplina eclesiástica, ha reconocido y juzgado no solo de una gracia concomitante, sino de una gra
necesarios el clero hacer observar estrechísimamente cia preveniente que escite nuestra voluntad, nos ins
las santas y saludables reformas de las constituciones pire saludables pensamientos y buenos deseos. Esta
de los concilios provinciales de los últimos tiempos en gracia no es pues la recompensa de los santos deseos
varias provincias del reino, y aun el renovar y con - que hemos formado por nosotros mismos y por nues
tinuar los referidos concilios en cada provincia de tras propias fuerzas; al contrario, es su principio y
año en año en lo sucesivo, á lo menos por algunos causa; por consiguiente es puramente gratuita, pro
años, hasta que se consiga restablecer el buen orden, viene únicamente de la bondad de Dios y de los mé
segun y conforme á las ordenanzas de Blois y de Me— ritos de Jesucristo. S. Próspero dice muy bien, segun
un: amonesta á los arzobispos y obispos que celebren S. Agustin, que desear la gracia es ya un principio de
los concilios provinciales cada tres años, sin perjuicio gracua.
de tenerlos mas á menudo cuando les parezca necesa Esto no impide que Dios no recompense muchas
rio para restablecer la antigua disciplina de la Iglesia veces nuestras fidelidad á la primera gracia con la se
y corregir las costumbres eclesiásticas en los pueblos gunda mas abundante; entonces esta no es menos
sujetos á su jurisdicion, procediendo en ello en la gratuila que la primera, puesto que no se ha mere
forma ordinaria y de costumbre; y para la ejecucion cido ni obtenido mas que por el ausilio de la primera.
Tambien es este el parecer de S. Agustin, l. , con -
de una obra tan buena manda á los jueces reales les
ausilien cuando lo reclamen». tra duas epis. Pelag., c. 6, n. 13. «Cuando los pela
Esta ordenanza fue registrada en el parlamento gianos, dice, sostienen que Dios ayuda el buen propó
de Paris con la modificacion solamente de que los ar— sito de cada uno, recibiriamos de buena gana esta
zobispos y obispos solo deberian tener sus asambleas proposicion como católica, si confesasen que este buen
y concilios provinciales cada tres años. propósito, que es ayudado por una segunda gracia,
Por otra declaracion del 16 de abril de 16' 6, «el no ha podido hallarse en el ¿ sin una primera
rey amonesa y exhorta á los arzobispos y metropoli gracia que le ha precedido.
lanos que celebren los concilios provinciales á lo me lay catecismos en los que se dice que el cuerpo y
nos cada tres años en el sitio de su provincia que masá sangre de Jesucristo se hallan bajo cada una de las es.
proposito les pareciese, con el objeto de atender á la pecies consagradas por concomitancia ó por acompa
disciplina y correccion de las costumbres y direccion amiento; se ha querido decir con esto que el cuerpo
de la policia eclesiástica é institucion de los seminarios de Jesucristo en la Eucaristia, siendo un cuerpo ani
y escuelas, segun el tenor de los santos decretos; pre mado, no puede estar alli sin tener la sangre y alma;
viniendo á los jueces que no traten de impedir direc por lo que la sangre de este divino Salvador no puede
la ni indirectamente su celebracion , obligándoles á hallarse separada del cuerpo. De lo que se deduce
que presten ausilio en la ejecucion de los decretos y que el cuerpo, la sangre y el alma de Jesucristo estan
ordeñanzas de los mismos, sin que tengan efecto al igualmente bajo la especie de vino y bajo la especie de
uno suspensivo las apelaciones que interpongan de pan. V. EUCARusTIA.
o que se haya resuelto». Esta declaracion fue regis Concordancia. Es un diccionario de la Biblia,
trada en el parlamento de París en 26 del mismo mes,
y se puso en ejecucion. en el que se han puesto por orden alfabético todas las
palabras de la Sagrada Escritura, á fin de poder com
-

Cinco años despues de esta misma escribió el rey pararlas juntas y ver si lienen el mismo sentido en
á Mr. Ilarlai, arzobispo de Rouen, manifeslandole es
taba satisfecho de la convocacion de un concilio que todas las partes donde se hayan empleado. Las concor
habia hecho aquel prelado en su provincia, dicién dancias tienen tambien otro uso, que es indicar pre
dole que no solo le parecia muy conveniente, sino cisamente los pasajes de que hay necesidad cuando
tambien le exhortaba á que perfeccionase una obra se los quiere citar esactamente.de palabras sirven para
tan necesaria al bien de la Iglesia, y le aseguraba que Estos diccionarios ó tablas
le preslaria el ausilio necesario para la celebracion ilustrar muchas dificultades, hacer desaparecer pre
del concilio. es los incrédulos creen ha
tendidas contradiccion que
llar en los libros santos, cilar esaclamente el libro,
Asi que resulta de estas disposiciones que los con— TOM10 I. 65
 CON (470 CON
el capítulo, el versículo en que se hallatal pasaje, etc. blias hebreas hasta la edicion de Alhias, judio de Ams
Asi se han hecho concordancias en latin, en griego y terdám, que en las dos hermosas y correctas edicio—
en hebreo. -
nes que ha hecho de la biblia hebrea en 1666 y 1667
La concordancia latina hecha sobre la vulgata es ha señalado cada versículo. Habiendo hecho impri
la mas antigua: convienen bastante en atribuirla á mir Valablo una biblia latina con los capítulos divi
Hugo de Saint-Cher, que de simple dominico llegó didos asi en versículos distinguidos por números, se
á cardenal, y á quien se llama comunmente el carde ha seguido su ejemplo en todas las ediciones poste
nal Hugo; murió en 1262. Este religioso habia estu— riores: todos los que han hecho concordancias y en
diado mucho la Sagrada Escritura, habia hecho lam neral todos los autores que citan la Escritura, la
bien un comentario sobre toda la Biblia; esta obra le ancitado desde este tiempo por capítulos y versícu
obligó á hacer una concordancia sobre la vulgala; en los. Pero la division de las páginas de un libro por
tendió que una tabla completa de las palabras y fra las letras mayúsculas del alfabeto, inventada por el
ses de la Escritura Santa seria de muchísima utilidad cardenal Hugo, se ha puesto en uso para la mayor
ya para ayudará entenderla mejor comparando las parte de los demas libros, ya de escritores eclesiásti
frases paralelas, ya para citar esactamente los pasa cos, ya de autores profanos; por este medio es por el
ges. Habiendo formado su plan empleó un número de que se ha llegado á hacer tablas muy cómodas, que
religiosos de su Orden, en reunir las palabras y colo tambien son una especie de concordancias.
carlas por órden alfabético; con el ausilio de lantas La concordancia hebrea del Rabino Nathan ha
ersonas se acabó bien pronto su obra. Ha sido per sido muy perfeccionada por Mario de Calasio, religioso
eccionada despues por muchos, sobre todo por Ar franciscano cuya obra se imprimió en Roma en 1621,
lot, Thuscus y por Conrado Halberstade. El primero y despues en Lóndres el año 177, en vol. en folio.
era franciscano, el segundo dominico, que vivian Es un libro muy util para los que quieren entender
ambos hácia fines del mismo siglo. - bien el antiguo Testamento en el original; ademas de
Como el principal objeto de la concordancia era ha ser la concordancia mas esacta, es tambien el mejor
llar facilmente la palabra ó el pasaje de que se tiene diccionario º
hay para esta lengua. Puede verse en
necesidad, el cardenal Hugo vió que desde luego era el prefacio de esta obra en qué consisten las adicio
necesario dividir cada libro de la Escritura en sec nes y correcciones que hizo Calasio al trabajo del Ra—
ciones, y despues estas secciones en subdivisiones mas bino Nathan.
cortas, con el fin de hacer en su concordancia retni Al fin de la palabra Biblia hemos observado que
siones que indicasen precisamente el lugar, sin que la division del testo griego del nuevo Testamento en
hubiese necesidad de recorrer una página enlera. Las capítulos y en versículos es mucho mas antigua, pues
secciones que hizo son nuestros capítulos, y son tan que data del siglo IX; pero no se ha seguido en la
comodas que se han conservado despues. Desde que mayor parte de los manuscritos. Las primeras edicio
apareció su concordancia se ha vistó la utilidad que nes griegas del nuevo Testamento dadas por Roberto
todos han tenido con ella, y para hacer uso es nece Esteban, no estaban divididas en versículos; pero co:
sario poner las divisiones en la Biblia de que nos val mo quiso dar una concordancia griega de este testo,
gamos; de otro modo sus remisione8 no servirian de que en efecto se imprimió por Enrique su hijo, se vió
nada; pero las subdivisiones de Hugo no eran versí obligado á señalarla con versículos. Erasmo Schmitd
culos. Dividia cada seccion ó cada capítulo en ocho profesor de lengua griega en Wurtemberg, dió en
partes iguales, cuando era largo, y en menos cuan 1638 una concordancia griega del nuevo Testamento
do era corto; cada una estaba señalada al margen mas esacta que la de Enrique Esteban. Prideaux,
por las primeras letras mayúsculas del alfabeto, A, B, Hist. de los judios, t. 1, l, 5, p. 208.
C, D, E, F, G, á distancia igual una de otra. Los ver La primera concordancia griega de la version de
sículos, tales como los tenemos en el dia, son inven los Setenta fue hecha por Conrado Kircher, teólogo
cion de un judio. luterano de Ausburgo, impresa en Francfort en 1667
Hácia el año 130, un famoso rabino llamado Rab en 2. vol. en l.º, pero ha sido oscurecida por la que
bi Mardoqueo Nathan, que habia disputado muchas ve ha dado Abraham Frommio, profesor en Groninga en
cescon los cristianos sobre la religion, conoció el gran dos vol, en folio y que se ha impreso en Amsterdam
servicio que sacarian de la concordancia latina del en 1718.
cardenal Hugo y con qué facilidad les haria hallar los
pasajes de que tuviesen necesidad; le gustó esta in Comcordia ó armon la de los Evange
vencion y al instante se paso á hacer una concordan llos. Obra destinada á demostrar la conformidad de
cia hebrea para los judios, Empezó esta obra el año la doctrina enseñada, los hechos y las circunstancias
133 y la acabó el año 1,5. Se han hecho de ella referidas por los cuatro Evangelistas. Se ve que no es
muchas ediciones: la que ha dado Bustorf, hijo, en lo mismo que una concordancia; esta es una tabla
Basilea en 1632 es la mejor. alfabética de todos los pasages de la Sagrada Escritu
ltabbi Nathan componiendo este libro, halló que ra en los que se halla tal palabra; una concordia es
era necesario seguir la division de los capítulos que la ¿ los dogmas, de los preceptos, de
el cardenal Hugo habia introducido; pero invento sib los hechos escritos por diferentes autores para formar
divisiones mas cómodas, á sal er, la de los versículos de ellos una historia seguida segun el orden de los
y tuvo cuidado de señalarlos con números puestos a Con le('imien loS. -

al márgen. Para no sobrecargar demasiado los már— Como la narracion de las acciones y de las lecciones
genes, se contentó con señalar los versículos de cinco de Jesucristo ha sido escrita por cuatro autores dife
en cinco, y asies como se ha ejecuta lo despuesenlas bi rentes, es necesario aprocsimarlos y compararlos á
 n
CON 1) CON
fin de demostrar que el uno no contradice al otro; que Por último, se llama concordia el libro que el je
estas cuatro historias forman una cadena bien soste suita Molina habia titulado Concordia liberi arbitrii,
nida, y refutar de este modo á los incrédulos que pre cum auariliis dicinae gratioe, obra que ha ocasionado
tenden hallar en ellas contradicciones. Tambien la vivas disputas entre los teólogos. V. MoliNismo.
historia de los reyes del pueblo judio se halla conte
nida no solo en los cuatro libros de los Reyes, sino en Concubinato. Comercio habitual entre un hom
los dos libros de los Paralipómenos, y hay variedades bre y una muger que quedan en libertad de separar—
en estas dos narraciones que no han sido escritas por se cuando les acomoda. Es evidente que este desór
el mismo autor; ha sido, pues, necesario confrontarlas den es criminal en sí mismo y contrario al bien de la
y conciliarlas. sociedad, por consiguiente prohibido, no solo por la
La primera concordia ó armonía de los Evangelios ley positiva del cristianismo, sino por la ley natural.
se atribuye á, Taciano, discípulo de S. Justino, que Los que son culpables de esto no desean tener hi
vivia en el siglo II, la intituló Diatessaron; es decir, jos, mas bien lo temen; seria una carga para ellos
por los cuatro, y esta es la que se ha llamado despues cuando quisieran separarse. No se prefiere este esta
el Evangelio de Taciano y de los encratitas. No se ha do á un matrimonio legítimo sino por dispensarse de
acusado á este autor de haber alterado el testo de los llenar los deberes de la paternidad; y cuando de él re
Evangelios; pero su obra no ha dejado de colocarse sultan hijos, ordinariamente son abandonados.
en el número de los Evangelios apócrifos, porque Ta En los escritos de los censores de la historia santa
ciano p0dia haberse engañado en la comparacion de se ha hablado muchas veces del concubinato de los
los hechos y de los dogmas. S. Teófilo de Antioquía, patriarcas; esta palabra no está bien usada, no se
que vivia poco mas ó menos en el mismo tiempo, ha debe confundir el desórden que espresa con la poli
bia hecho tambien una concordia de los Evangelios, gamia. No vemos este ejemplo en los patriarcas, si
segun S. Gerónimo, el que no obstante hacia mas no únicamente la poligámia; en este artículo proba
aprecio de la de Ammonio de Alejandria. Se atribuve remos que entonces no era contraria al derecho na
lambien una á Eusebio de Cesárea; pero no nos queda lural.
nada de estas obras antiguas; tenemos únicamente los Las dos mugeres de Lamec se llaman sus esposas.
tres libros de S. Agustin, de consensu Evangelistarum. Gén., c. , y. 19 y 23. Se dice que los hijos de
En el siglo pasado y en el nuestro, muchos escri Dios tomaron esposas de entre las hijas de los hom
tores han hecho concordias ó armonias, Toinard, bres que habian elegido; esta última palabra no
Whiston, el doctor Arnaldo, etc. La que nos ha pa significa que las hubiesen tomado desde luego por
recido mas cómoda para el uso, es la de M. Le Roux, concubinas como se afecta suponer. Sara, esteril, da
cura de Andeville, diócesis de Chartres, impresa en á su esposo, Agar, su sierva ó su esclava, con el fin de
8.” en París en 1699, En la biblia de Aviñón, t. 5, que tuviera hijos, ella misma resolvió adoptarlos; es
22 y 19, se hallará la concordia de la historia de te era una especie de matrimonio. En efecto, Ismael
os Reyes, la de los Evangelios, t. 13, p. 27 y 561. fue considerado como un hijo legítimo. No se separó
Los protestantes han llamado tambien concordia ó con su madre de la casa paterna, sino por una órden
formulario de union dos escritos diversos, célebres espresa de Dios y por razones particulares; se reu—
entre ellos. El 1." fue la obra de un teologo lutera nió á lsaac para dar sepultura á su padre comun.
no titulada Fórmula consensus, compuesta el año Gén. c. 25, y. 9. Los hijos que tuvo Jacob de sus
1576 por órden de Augusto, elector de Sajonia; este criadas fueron reputados tan legítimos como los de
príncipe y los duques de Wirtemberg y de Brunswik sus esposas.
querian hacerla adoplar por los teólogos de sus es— En el estado de sociedad puramente doméstica, en
tados, de los que muchos se inclinaban á las opinio la que las criadas eran esclavas, pero podian here
nes de Calvino con respecto á la Eucaristía. Pero esta dar; en que la poligamia era casi inevitable y per
tentativa, aunque apoyada con la fuerza del brazo mitida, es necesario no dar á las palabras el mismo
secular, lejos de calmar las disputas, las animó mas; sentido que se les dá en el estado de sociedad civil, en
la pretendida concordia fue combatida no solo por que el derecho natural no es ya el mismo. V. DeRe
los calvinistas, sino por muchos doctores luteranos, CH0 NATURAL.
hubo escritos violentos de una y otra parte. El 2.º
que apareció entre los calvinisias en 1675 bajo el Concuplseencia. En el lenguaje teológico
mismo título, fué compuesto por M. Enrique Hei— significa el apetito desordenado ó el deseó inmodera
degger, profesor de teologia en Zurich, con el desig do de las cosas sensuales, efecto del pecado original.
nio de conservar entre los teólogos de la Suiza la El P. Malebranche atribuye el origen de la concu
doctrina del sínodo de Dordrecht y desterrar de ella piscencia á las impresiones hechas por los objetos sen:
las opiniones de Amiraut y de algunos otros ministros sibles en el cerebro de nuestros primeros padres en el
franceses. Este formulario de union no produjo me momento de su caida, impresiones que se han trans
jores electos que el que habia rebelado á los luteranos; mitido y continúan comunicándose á sus descendien
se suprimió en 1686 en el canton de Basilea y en la re tes. Lo mismo, dice, que los animales producen otros
pública de Ginebra á instancias de Federico Guillermo, semejantes y con las mismas señales en el cerebro,
elector de Bandebourgo. En 1718 los magistrados de las mismas simpatias ó antipatias, lo que produce la
Berna quisieron hacerlo firmar por todos los minis misma conducta en iguales circunstancias; asi nues
tros, sobre todo por los de Lausania, no salieron con tros primeros padres que recibieron por su caida una
su intento; el rey de lnglatera y los Estados de Ho impresion profunda de losobjetos sensibles, la comuni
landa emplearon su mediacion para hacerlo suprimir. can á sus hijos. No seria dificildemostrar la poca esac
 CON (72) CON

titud de esta comparacion; nos debemos limitará los habitantes te entregarán.» David se retiró, Saul
creer el pecado original y sus efectos sin querer espli no vino y David no fué entregado. Jesucristo dijo á
carlos. los judios en el Evangelio, Mat., c. 11, y, 21: «Si
Los escolásticos llaman apetito concupiscible el de— hubiese hecho en Tiro y en Sidon los milagros que
seo natural de poseer un bien, é irascible el deseo de he hecho entre vosotros, estas ciudades hubieran
librarse y huir del mal. hecho penitencia con ceniza y con cilicios.» Estos
S. Agustin, l. , contra Julian., c. 1, n. 65, milagros no se hicieron en Tiro, y los de Tiro no hi
distingue cuatro cosas en la concupiscencia; la nece cieron penitencia. Con respecto á esta clase de futu -
sidad, la utilidad, la vivacidad y el desórden del sen ros condicionales que no sucederán nunca, pregun
timiento: sostiene con razon que este desorden es un tan los teólogos si Dios los conoce por la ciencia de
vicio, en lugar que los pelagianos condenaban solo el simple inteligencia como conoce las cosas simple
esceso: , pero independientemente del esceso, esta mente posibles, ó si los conoce por la ciencia de vi
inclinacion es un mal, puesto que es necesario re sion como los futuros absolutos. . - - -

sistirá ella y reprimirla. Queda en los bautizados y Unos sostienen que por la ciencia de simple inteli
en los justos como una consecuencia y una pena del gencia, otros pretenden que es necesario admitir para
pecado original para ejercitar la virtud; esto es lo que esta clase de futuros una ciencia media entre la
nos dá la gracia necesaria para obrar bien. ciencia de simple inteligencia y la ciencia de vision.
S., Pablo da muchas veces á la concupiscencia el lla metido mucho ruido esta disputa porque pertene
nombre de pecado, porque es un efecto del pecado ce á la materia de la gracia; no nos toca á nosotros
original; y que nos conduce al pecado; asi lo espli terminarla. V. CIENCIA DE Dios.
ca S. Agustin, i. 1, contra duas Epist. Pelag.,
c. 13, n. 27; op. imperf. l. 2, n. 71, etc. En con Condicionales (decretos). Los calvinistas
secuencia cuando el santo doctor sostiene que la con rigidos ó gomaristas pretenden que todos los decretos
cupiscencia es un pecado, debe entenderse un vicio, de Dios, relativos á la salvacion ó á la condenacion
un defecto, una mancha, y no una falta imputable de los hombres, son absolutos: los arminianos sos
y digna de castigo. tienen que estos decretos son solo condicionales, que
En efecto, este santo doctor ha conservado cons— cuando Dios quiere reprobar á tal hombre, es por
lantemente la definicion que habia dado del pecado que prevee que este hombre resistirá á los medios de
propiamente dicho, refutando á los maniqueos. «Es, salvacion que le serán concedidos. Entre los teólo—
dice, la voluntad de hacer lo que la ley prohibe, y gos católicos muchos admiten un decreto absoluto
aquellos de que somos libres de abstenernos». Pero de predestinacion, pero no admiten ningun decreto
observa que esto no nos es tan libre como lo era á absoluto de reprobacion. - -

Adan, Retrac., l, 1, c. 9, 15 y 25. No se deduce de Los pelagianos y los semipelagianos pretendian que
esto que la mancha original no sea un pecado propia— el decreto ó la voluntad de Dios de conceder la gra
mente dicho; pero esta mancha no consiste en la cia á los hombres es siempre bajo condicion que el
concupiscencia sola. Véase ORIGINAL. Si Beausobre hu hombre mismo se dispondrá por sus fuerzas naturales
biera puesto mas atencion , no habria acusado á san á merecer la gracia. Este error ha sido condenado
Agustin de haber razonado sobre la concupiscencia justamente; supone que la gracia no es gratuita, que
como los maniqueos, y de haber defendido que era puede ser la recompensa de un mérito puramente na
viciosa y criminal en sí misma. ¿ ; suposicion contraria á la doctrina espresa
de la Sagrada Escritura que nos enseña, que por no
Concurso de Dios á las acciones de las criatu— sotros inismos no somos capaces de formar un buen
ras. Es una verdad de fé que la gracia, que es la ac pensamiento, sino que toda nuestra suficiencia ó
cion inmediata de Dios mismo, nos es necesaria para nuestra capacidad viene de Dios. l. Cor. c. 3 y.5.
toda accion sobrenatural y útil á la salvacion, que Pero hay decretos condicionales de otra especie y
esta gracia no es solo concoinitante ó cooperante, sino muy diferentes. Cuando se dice: Dics quiere salvará
preveniente. Este dogma ha dado lugará preguntar, los hombres si ellos lo quieren, esta proposicion puede
si tenemos necesidad de semejante concurso inmedia tener un sentido católico y un sentido herélico., Dios
to de Dios para las acciones naturales. Como esla quiere salvar á los ¿ si quieren, es decir,
cuestion es puramente filosófica, nosotros no debe si por sus esfuerzos y por sus deseos naturales previe
mos tocarla. Observaremos únicamente que no cono nen la gracia y la merecen: hé aqui el sentido pela
cemos ningun pasaje espreso de la Escritura, ni nin giano y herético, Dios quiere salvar á los hombres
guna razon teológica que pueda obligarnos átomar si quieren, es decir, si á la gracia que
partido en esla disputa. No puede haber ninguna les previene, que escita sus deseos y sus esfuerzos,
comparacion entre las acciones naturales y los actos pues que les deja la libertad de resistir; hé aqui el
sobrenaturales. sentido católico. Muchas veces se los ha confundido
maliciosamente para poder acusar de pelagianismo á
ºcondicional. Los teólogos lo mismo que los los teólogos ortodoxos. V. VoluNTAD DE Dios.
filosofos se han visto en la necesidad de disinguir
los futuros condicionales, de los futuros absolutos. Da v:on dignidad. Los teólogos escolásticos lla
vid pregunta al Señor, 1 Reg., c. 23, y 11. «Si man mérito de condignidad, meritum de condigno,
permanezco en la ciudad de Ceila , vendrá Saul á aquel á que Dios, en virtud de su promesa, debe una
prenderme y los habitantes me librarán de entre recompensa de justicia; y mérito de cóngruo, meri
sus manos?» El Señor responde: «Vendrá Saul y tum de congruo, aquel á que Dios nada ha prometi
 473) CON
coN
do sino al que concede siempre ago por misericordia. y. 18, que una multitud de fieles venian á buscará
El primero exige condiciones de parte de Dios, S. Pablo, confesaban y se acusaban de sus pecados.
de parte del hombre y de parte del acto meritorio. Por «Si confesamos nuestros pecados, dice S. Juan, Dios
parte de Dios se necesita una promesa terminante, justo y fiel en sus promesas no los remitirá»; I. Joan:,
porque Dios no puede debernos nada de justicia, c. 1, y. 9... Cuando Santiago dijo á los fieles, c. 5,
sino en virtud de una promesa. Por parte del hombre y. 16, confesad vuestros pecados unos á los otros, no
es necesario: 1.° Que se halle en estado de justicia ó pensamos que los haya exhortado á acusarse públi
de gracia santificante. 2.º Que sea viador en la tier camente y á toda clase de personas indiferentemente,
ra. El acto meritorio debe ser libre, moralmente bue veremos despues cómo entienden los protestantes es
no, sobrenatural en su principio, es decir, hecho tos pasages.
por el movimiento de la gracia y referido á Dios. En el siglo 1, S. Bernabé dijo en su carta núm. 19:
De estos principios, los teólogos deducen que un jus vosotros confesareis vuestros pecados. Y S. Clemente,
to puede tnerecer de condigno el aumento de la gra Epíst. 2, n. 8: «Convirtámonos...... porque cuando
cia y la vida eterna; pero que el hombre no puede hayamos salido de este mundo no podremos ya con
merecer lo mismo la primera gracia sanlificante ni fesarnos ni hacer penitencia».
el don de la perseverancia final; puede sin embargo En el siglo II S. Ireneo, ado. Haeres., l. 1, c. 9,
alcanzar ambos por misericordia, y lo debe esperar. hablando de las mugeres que habian sido seducidas
V. MÉRITo. por el hereje Marcos, dijo: que habiéndose convertido
y vuelto á la Iglesia, confesaron que se habian dejado
Condormientes. Nombre de secta, ha habido corromper, por este impostor. L. 3, c. 1, dice: que
dos llamadas asi: las primesas infestaron la Alema Cerdon, volviendo muchas veces á la Iglesia y hacien
nia en el siglo XIII; tuvieron por gefe un hombre de do su confesion, continuó viviendo en una alternativa
Toledo. Se reunian en un lugar cerca de Colonia; de confesiones y recaidas en sus errores.
alli, se dice, adoraban una imágen de Lucifer, y Tertuliano, L. de Paenit., c. 8 y sig., habla de la
recibian sus oráculos; pero este hecho no está sufi confesion como de una parte esencial de la penitencia;
cientemente probado. Añade la leyenda que habien reprende á los que por vergüenza ocultan sus peca
do llevado alli un eclesiástico la Eucaristía se rompió dos á los hombres, como si pudiesen tambien ocultar
el ídolo en mil pedazos: esto se parece mucho á las los á Dios. -

fábulas populares. Dormian en una misma habitacion
sin distincion de sexo bajo pretesto de caridad.
Los otros que aparecieron en el siglo XVI eran
una rama de los anabaptistas; caian en la misma in
decencia que los precedentes y bajo el mismo pretes
to. No es la primera vez que esta torpeza se ha visto
en el mundo. W. ADAMITAs.
Confesion auricular y sacramental.
Es la declaracion que hace un pecador de sus culpas
á un sacerdote para recibir la absolucion de ella.
Los protestantes han hecho los mayores esfuerzos
ara probar que esta práctica no está fundada ni en
a Sagrada Escritura, ni en la tradicion de los prime
ros siglos. Daillé ha compuesto un libro abultado so—
Orígenes Homi in Levit. n. 4, dice que un medio
para el pecador que quiere volverá entrar en gracia
de Dios, es declarar su pecado al sacerdote del Señor
buscar su remedio. Repite lo mismo llom. 2, in.
Ps. 37, y. 19. (n. 29, p. 7).
En el siglo III la Iglesia condenó á los montanistas,
y despues á los novacianos, que la negaban el poder
de absolver los grandes delitos. ¿Cómo se podrian
distinguir de las faltas ligeras sino por la confesion?
S. Cipriano, de Lapsis, p. 190 y 191, hace men
cion de los que confesaban á los sacerdotes el simple
pensamiento que habian tenido de volverá caer en la
idolatría, exhorta á los tieles á que hagan lo mismo,
mientras que la remision dada por los sacerdotes es
aceptada por Dios. -

bre este asunto; ha sido refutado por muchos de nues
tros controversistas, en particular por D. Dionisio de
Santa Marta, en un tratado de La confesion contra
los errores de los calvinistas, impreso en Paris en
1685, en 12.° Este autor ha referido todos los pasa
jes de la Sagrada Escritura y de los PP. de todos los
siglos, empezando desde los apóstoles hasta nosotros:
ha demostrado que no hay ningun punto de fé ó de
disciplina sobre el que la tradicion sea constante y
mejor establecida.
En el Evangelio, Mat. c. 18, y . 18, Jesucristo ha
dicho á sus apóstoles: «Todo lo que atáreis ó desatá
reis sobre la tierra será atado ó desatado en el cielo».
Joan. c. 20, y. 22: «Recibid el Espíritu Santo; á los
que remitiereis los pecados les serán remitidos, y
retenidos á los que los retuviéreis». Los apóstoles no
podían hacer un uso legítimo y sabido de este poder, á
menos que no conociesen los pecados que debian re
mitir ó retener, y el medio natural de conocerlos es
la confesion.
En efecto, leemos en las Actas de los apóst., c. 19,
Lactancio, Dicin. Instit, l. , c. 17, dice que la
confesion de los pecados, seguida de la satisfaccion,
es la circuncision del corazon que Dios nos ha man
dado por los profelas. Cap. 30, dice que la verdadera
Iglesia es la que cura las enfermedades del alma por
la confesion y la penitencia;
Nos abstenemos de citar los PP. del siglo IV y de
los siguientes; se pueden ver sus pasages no solo en
D. de Santa Marta, sino en Le Drouin de re sacra
mentaria, t. 7. Hé aquí sin embargo algunos tes
tos: S. Atanasio (sobre el Levítico): «Examinemos
en nuestra conciencia si estan disueltos nuestros vín
los dis7á
no lo que
cípulosydesi Jesus
culos; todavia,
estanestan á vuestro lado áprontos
entregaros
desatároslos en virtud de la polestad que han recibido
del Salvador: Todo lo que desatáreis sobre la tierra
será desalado en el cielo, etc».
S. Basilio (quaest 229). «Debemos guardar para
la confesion de los pecados el mismo cuidado que se
sigue para las enfermedades del cuerpo. Asi como no
descubrimos á todos las enfermedades de nuestro
 CON 47) CON
cuerpo, ni á los que primero llegan, sino únicamente tro que posee las palabras de curacion no tendrá mas
á los que saben curarlas, lo mismo la confesion de recursos que el médico con el enfermo que se aver
los pecados no se puede hacer sino á los que puedan güenza de descubrirse á él: porque lo que ignora, la
curarlos.... Se debe necesariamente, Regl. 288, des medicina no lo cura. Quod enim ignorat, medicina
cubrir sus pecados á los que han recibido la dispen no n curat» . -

sacion de los misterios de Dios». S. Agustin, Homilia sobre el Ps. 66. «Estad triste
S. Paciano (Erhortacion á la penitencia): «¿Qué antes de la confesion, pero alegraros despues porque
haceis los que engañais al sacerdote, los que le estra— sereis curado. El veneno se habia reunido en vuestra
Vias por la ignorancia en que le dejais, ó le poneis conciencia; el tumor se habia hinchado, os daba tor—
en la imposibilidad de juzgar, no dándole un pleno mento y no os dejaba ningun descanso. El médico
conocimiento de vosotros mismos?..... Os encargo, puso en él el bálsamo de las palabras; y aun algunas
Pºs, hermanos mios, porque á Dios nada se le es veces un fuego saludable; abre, amputa: reconoced
ºapa, que dejeis de oculta vuestra conciencia lla su mano bienhechora. Confesaros, que por la confe
gada, os lo ruego por el peligro en que me esponeis. sion sale y corre toda podredumbre que se habia
lºs enfermos prudentes no se avergüenzan de mani acumulado. Entonces estareis alegres y contentos; lo
festarse al médico aunque deba aplicar el hierro y el demas será de fácil curacion». Hablando del pecador
fuego álas partes mas secretas, s. Gregorio Niseno, en general: «Que vaya á presentarse al pontífice, por
carta al obispo de Mitylena: «Asi como en el trata que á él se ha confiado la administracion de las llaves;
miento de las enfermedades corporales la medicina que reciba de él el modo conveniente de satisfaccion,
no liene mas objeto que la curacion del que padece, que haga lo que es necesario para recobrar la salud y
Pºrº una grande variedad en la aplicacion de los re servir de ejemplo á los demas; que si su pecado le
mediºs (porque segun la variedad de las enfermeda ha causado una gran pérdida y mucho escándalo á los
des, los remedios y el régimen deben ser propios y demas, si el pontífice cree conveniente para la edifi—
convenientes á cada una de ellas); lo mismo en las en cacion de la Iglesia que este pecado sea conocido, no
fermedades del alma, siendo muy variados los pade solo de muchos sino de todo el pueblo, que no se re
cºmientos, la curacion debe serlo tambien, puesto que huse á esto, que no se resista, y que por vergüenza
ºººººsario aplicar los remedios segun las enferme— no vaya añadir un tumor funesto á una llaga ya
dades». Discurso sobre la muger pecadora, «Tomad mortal». Sermon 392: «Haced penitencia como se
un sacerdote como un padre, hacedle el confidente de hace en la Iglesia, á fin de que la Iglesia ruegue por
vuestras penas, el compañero de vuestra afliccion. vosotros. Que nadie diga: Yo la hago interiormente y
Enseñadle sin vergüenza lo que está oculto en vuestra delante de Dios, que me perdone , él sabe que yo la
alma. Descubridle los secretos de vuestra conciencia, hago en mi corazon.... y qué.... Se han dado en
ººººº se descubren al médico las heridas ocultas. El vano las llaves á la Iglesia....? Esto seria frustrar el
á la vez cuida rá de vuestro honor v de vuestra salud». Evangelio; frustrar las palabras de Jesucristo».
º Ambrosio, sobre la penitencia, l. 2, c. 8, exhor. S. Leon, carta 136, c. 2. «Enlre tanto basta indicar
ando
la
á los «Debemos
ºerte: pecadores abstenernos
á no diferir sudesde
conversion
ahora dehasta
to solo á los sacerdotes y por una confesion secreta los
delitos de las conciencias. Porque por laudable que
dos los vicios, porque ignoramos si entonces podre parezca aquella plenitud de fé que en presencia de
lºs confesarnos á Dios y al sacerdote». Refutando en Dios no teme avergonzarse delante de los hombres;
el c. 2 los prelestos de los que rehusan acercarse al sin embargo, como todos los pecados no son de natura
ººrado tribunal de la penilencia: «Nadie hace ma leza que los penitentes no puedan tener ningun miedo
Sºuria al cielo que los que quieren abrogar sus en manifestarlos, renunciemos á aquella práctica re
ººdalos y anular el encargo que ha dado. Porque prensible, por temor de que muchos no se alejen de
habiendo dicho Nuestro Señor. A que remitiéreis los los remedios de la penitencia, disuadidos ya por la
Pecados les serán remitidos; al que los retuviéreis les vergüenza, ya por el medio de publicar delante de
serán retenidos; á quién deberemos honrar mas, al que sus enemigos acciones que podrian ser castigadas por
obedece su orden"ó al que la resiste? Mas la Iglesia las leyes civiles. Basta una confesion hecha primero
º ºestra obediente, ya atando ó desatando los pe á Dios, despues al sacerdote que intercede por los pe
cados». cados del penitente. Por esto se atraerán muchos á la
S. Juan Crisóstomo, Homilia 2 sobre el Génesis: «Si penitencia, cuando sus conciencias no sean descubier
el pecador quiere apresurarse á hacer la confesion de las delante del público». Nos limitamos á estos testos.
Sus crímenes, si quiere descubrir la úlcera á un mé Lo esencial es probar la falsedad de lo que se ha
dico que le trata sin permitirse réplicas, si quiere defendido por los protestantes, á saber: que no hay
aceptar los remedios, que no se lo diga mas que á él ningun vestigio de confesion sacramental en los tres
solo sin saberlo nadie, pero que le confiese esactamen primeros siglos de la Iglesia.
le todos sus pecados, llegará fácilmente á curarlos, Pretenden que en los testos que alegamos de la Es
porque la confesion de los pecados cometidos en su critura y de los PP., no se trata de la confesion auri
abolicion». cular ni de la absolucion, sino de una declaracion que
S.Gerónimo sobre el capítulo 10 del Eclesiast. «Si los fieles se hacian unos á otros por humildad, para
la serpiente infernal ha dado alguna mordedura ocul— obtener el ausilio de sus mútuas oraciones; que cuan
tº; si á solas y sin testigo se ha insinuado el veneno do los antiguos se valen de la palabra Exomologesis
del pecado y el desgraciado contaminado se obsti— confesion, entierden la confesion pública que hacia
ºººº!no decirlo, en no hacer penitencia, en no des parte de la penitencia canónica.
cubrir la herida á su hermano, á su maestro, el maes 1." Esto es falso; desde el siglo II Orígenes habla
 CON 475) CON
de una confesion hecha al sacerdote y no al comun de blica, solo exigió luego una confesion secreta y auri
los fieles. Ved, dice, Hom. 2, in psalm.37, lo que cular; fue por un rasgo de sabiduria: la condicta de
enseña la divina Escritura que no se deben oculiar los prolestantes; desechando toda confesion, y tergi
interiormente sus pecados. Porque del mismo modo versando á su placer el sentido de la Sagrada Escri
que aquellos cuyo estómago se halla pesadamente so— tura, es una loca temeridad.
brecargado con un alimento indigesto, con humores Los apóstoles y sus discípulos dijeron: confesad
flemas, si consiguen vomitarlas, se hallan aliviados puestros pecados; mil quinientos años despues dijeron
al instanle; lo mismo el pecador que oculta y retiene los reformadores: no hagais nada: la confesion es un a
en sí mismo sus culpas (¿son estas secretas?) se halla inrencion de que se han sercido los popaspara sujetar
interiormente oprimido, y sofocado, como por el hu— los fieles al clero: y se escuchó á los reformadores me
mor y la flema del pecado. Pero cuando llega á ser jor que á los apóstoles.
su propio acusador que denuncia y confiesa su estado, Bingham, que tanto estudió la antigüedad, despues
vomita al momento con el pecado la causa de su en - de haber referido los treinla argumentos que Daillé
fermedad interior. Sed circunspectos; ecsaminad, ved hizo contra la confesion auricular, se ve precisado á
al que debeis confesar vuestro pecado; conoced de confesar que los antiguos como Orígenes, S.Cipria
antemano el médico á quien debeis esponer vuestra no, S. Gregorio Niseno, S. Basilio, S. Ambrosio, san
debilidad; que sabe por compasion y sentimiento ser Paulino, S. Leon etc., hablan con frecuencia de la
enfermo con los enfermos, y llorar con los que lloran». confesion hecha á los sacerdotes solos; pero inventa
Tambien dice: Hom. 17 in Luc. «Si descubrimos diferentes razones y no quiere convenir en que esto se
nuestros pecados no solo á Dios, sino á los que pueden hiciese para recibir de los sacerdotes la absolucion
poner remedio á nuestras llagas y á nuestras iniqui sacramental. Origin. Eccl. l. 18, c. 3, S. 7 y siguien
dades, nuestros pecados serán borrados por el que di es. En este supuesto preguntamos de qué modo pue—
jo: «Mira cómo he disipado las iniquidades como una den ejercer los sacerdoles el poder que Jesucristo les
nube, y los pecados como una sombra». En el tercero dió para perdonar los pecados. Si los fieles no hubieran
S. Cipriano dice lo mismo de los pecados secretos tenido confianza en este poder ¿cómo se hubieran con
confiados a los sacerdotes, y de la remision concedi— fesado con los eclesiásticos mejor que con los legos?
da por ellos: luego lo entiende de la confesion sacra— En el fondo los treinta argumentos de Daillé se re
mental á la absolucion. «Cuanto mas viva es, dice, ducen á uno solo, que consiste en demostrar que en
De Lapsis, la fé, y mastimorata la conciencia de aque los primeros siglos no se habló de la confesión con
llos que sin haber llevado el crimen hasta sacrificar tanla frecuencia ni lan espresamente como en estos úl
ó recibir del magistrado ua falso é indigno atestado timos. ¿Pero qué importa si en ellos se dijo lo sufi—
de haberlo hecho, habiendo tenido únicamente este ciente para convencernos de que se reconocia enlon—
pensamiento, vinieron con sencillez y con dolor á ces la necesidad de una confesion cualquiera? Siem—
pre resulla que los protestantes no tienen razon en no
confesarlo á los sacerdotes del Señor, les abrieron su
conciencia, depusieron su carga á los pies de estos, y admitir ni practicar ninguna.
silicitaron un remedio saludable para sus llagas aun Si Daillé hubiese tenido la buena fé de citar los pa—
que leves y pequeñas. Saben que está escrito: «nadie sajes de los PP, que acabamos de alegar, hubiera
se burla del Señor, porque con él no hay astucias, ni visto que eran la refutacion complela de sus treinta
engaños; y mas gravenieule peca el que pensando de argumenlos.
Dios como de un hombre, se imagina que puede esca Este teólogo se engaña tambien cuando asegura
par de su castigo, porque su crimen es oculto. Indu que los griegos, los jacobitas, los nestorianos, los ar—
dablemente han pecado menos los que no han mirado minianos no creen necesaria la confesion; está proba
á los ídolos, los que á la vista de una multitud insul— do lo contrario de una manera incontestable por los
tante no han profanado la santa majestad de la fé, no libros y por la práctica de estas diferentes sectas.
han manchado sus manos con funestos sacrificios y su Véase Perpetuidad de la fé, t. , p. 7 y 85; t. 5, l. 3,
boca con viandas abominables. Su crimen fue menor, c. 5; Asseinani Bibi, orient., l. 2, pref. S. 5 Estas
hé aquilo que han ganado; pero por esto no está ino— sectas separadas de la Iglesia romana hace mil dos -
cente su conciencia....Que vayaa pues todos á confe— cientos años, no han tomado seguramente de ella el
sarse cuando aun viven y respiran, cuando su confe— uso de la confesion. Luego este uso era general á toda
sion puede ser admitida, , y cuando la satisfaccion y la Iglesia en el tiempo de , su separacion, y no una
la absolucion dadas por el sacerdote aun pueden ser disciplina nueva introducida en la Iglesia romana en
agradables á Dios» . el siglo XIII como pretender los protestantes. -

2." Supongamos por un momento que se trata de Conviene Bingham en que los novacianos fueron
una confesion pública, los PP. la creen necesaria; ¿lo tratados como cismáticos porque disputaban á la Igle
seria si Jesucristo y los apóstoles no la hubieran man sia el poder de perdonar los pecados. Ibid. c., S. 5,
dado? hubieran prescrito los pastores de la Iglesia con pero no nos dice de qué modo y por qué la Iglesia
su propia autoridad una práctica tan humillante, y se ejercia este poder, que constantemente se ha atribui
habrian sometido á ella los fieles? Luego toda la anti do en virtud de las palabras de Jesucristo; si conce
güedad creyó que en virtud de las palabras de Jesu dia ó rehusaba la absolucion de los pecados que no
cristo y de los apóstoles, se necesitaba para la peniten conocia y que no eran confesados. Ahora bien, sos—
cia una confesion hecha á los sacerdotes, ya en pú tenemos que en todo tiempo uno de los preliminares
blico, ya en secreto. ¿Con qué derecho no quieren re indispensables de la absolucion ha sido la confesion,
conocer ninguna los protestantes? Si la Iglesia des que siempre se ha confesado con los obispos ó con los
pues de conocer losinconvenientes de la confesion pú sacerdotes y no con otros.
 - CON vió CON
Esto se prueba por un hecho del siglo III, del política de los papas y de la ambicion del clero?
que han querido aprovecharse los protestantes. Sócra Mas de una vez se han arrepentido los protestantes
tes, Hist. ecles., .5, c. 19, refiere que despues de la de haber abolido el uso de la confesion. Los de Nu—
ersecucion de Decio, de consiguiente hácia el año remberg enviaron una embajada á Cárlos V para su—
¿ , los obispos nombraron un sacerdote penitencia plicarle que la restableciese entre ellos por un edicto,
rio para oir las confesiones de los que hubiesen peca Soto, in ...", dis, 18, q. 2, art. 1." Los de Strasbur
do, despues del bautismo. Dice que esta costumbre go tambien hubieran querido renovar su uso; Cartas
subsistió hasta su tiempo, escepto entre los novacia del P. Schfmacher, ..." carta, S. 3. Se ha conserva—
nos, que no querian que se admitiesen á la comunion do en Suecia por ser uno de los artículos convenidos
á estos caidos; pero que en Constantinopla el patriar en la confesion de Ausburgo; Bossuet Hist. de las Va
ca Nectario, que subió á esta silla el año 381, suprí riac, l.3, núm. 6. Mosheim nos dice que todavia se
mió el penitenciario, porque se supo por la confesion practica en Prusia, y reprende á un ministro de Ber—
de una mujer que habia ésta pecado con un diá lin porque en 1697 predicé contra este uso. Historia
cono; ¿ por esto dejó Nectario á cada fiel en la ecles. del siglo XVI, sec. 2.", 2." parle, c. 1, S.55.
libertad de presentarse á la comunion segun su con Algunos incrédulos ingleses han acusado al clero an
ciencia, y le imitaron los demas obispos homousia glicano de desear su restablecimiento y de trabajar
nos. Este nombre daban los arrianos á los católicos. para ello. Estado actual de la Iglesia romana, carta
Sozomeno, Hist. eccles., l. 7, c. 16, refiere lo mis al papa, p. 30 y 31: Esfuerzos impotentes, desde que
mo con leves modificaciones en las circunstancias. se logró persuadir á los protestantes que la confesion
De aqui inferimos: 1.º Que antes del año 250 no sacramental no es una institucion de Jesucristo, jamas
eran ordinariamente los sacerdotes los que oian las consentirán en volver á someterse á su yugo, Il tl I -
confesiones de los fieles sino los obispos. El año 390 el ca los primeros fieles se hubieran sujetado á él si hu
concilio de Cartago solo concedió a los sacerdotes, bieran tenido la misma opinion.
c. 3 y , el poder de reconciliar á los penitentes en Estos mismos hechos prueban que los protestantes
ausencia del obispo. 2.º Que se creia necesaria la con sensatos se avergüenzan en el dia de las invectivas que
fesion antes de recibir la comunion. 3." Que no se sus reformadores vomitaron contra la confesion auri—
ecsigia una confesion pública; de otro modo hubiera cular; sin embargo, este fue uno de los principales
sido inutil la creacion de un penitenciario. ...º Que motivos de su cisma y uno de los alraclivos con que
Nectario no hizo mas, suprimiendo el penitenciario, sedujeron á los pueblos. Pero los incrédulos, poco és
que restablecer la disciplina al estado que tenia antes crupulosos en la eleccion de sus ¿ 10 Se
del año 250. han desdeñado de repelir los mas falsos y mas fáci
Los protestantes, al contrario, sostienen que Nec ies de refutar.
tario abolió toda clase de confesion, lo que no se hu Dicen, con Bayle, que la confesion es peligrosa para
biera atrevido á hacer, y no hubiese sido imitado por el confesor y para la mayor parte de los penitentes,
los demas obispos, sino hubieran creido que la con que es una terrible tentacion para el primero escu -
fesion estaba prescrita por Jesucristo ó por los após char la relacion de ciertos desórdenes, y hay gran
toles Este aserto es absolutamente falso. En primer peligro, sobre todo, para las personas jóvenes en en
lugar Sócrates y Sozomeno no dicen que Nectario trar en pormenores. Sostenemos, por el contrario, que
abolió toda clase de confesion, y aun cuando lo hubie el mejor preservativo contra los desórdenes para to
ran dicho, no tendríamos obligacion de creerlos, do hombre sensato, es ver los escesos á que ellos
habiendo pruebas positivas en contrario. Dicen, en conducen. En un siglo en que la corrupcion ha llega
verdad que Nectario dejó á cada fiel en la libertad de do á su colmo, ¿hay nada mas mortificante ni doloroso
presentarse á la comunion segun su conciencia; esto para un hombre que cree en Dios, que el espectáculo.
significa que no se ecsigia como otras veces una con del olvido de la moral cristiana, el desprecio de to
fesion cualquiera de cada fiel, sino que le dejaba la das las leyes, y la depravacion de todos los princi
libertad de juzgar si tenia necesidad de ella ó no. Di pios que reinan en el mundo? Si fuera esto un atrac
cen que el cambio de disciplina relajó las costumbres, tivo para los corazones corrompidos, los eclesiásticos
y es indudab"e que la confesion pública fue un freno mas viciosos serian los que mas se apresurasen á ejer
poderoso para estas, mientras estuvo en uso. En se cer las funciones de confesor: y sucede asiº A no ha
gundo lugar vemos por los cánones del concilio de ber perdido toda vergüenza y todo temor de Dios, la
Cartago y por el testimonio de los PP. del siglo V, que relacion de los desórdenes solo sirve para humillar al
se continuó observando, al menos la confesion secreta hombre y hacerle arrepentir; los que quieren per
ó auricular, y que jamás cesó de ser practicada. Por manecer en ellos, no se confiesan.
último, ningino se ¿a sometido á ella si no hu Para hacer odiosa la doctrina católica aparenlan
biera estado persuadido de que Jesucristo la habia suponer que atribuimos á la confesion sola el poder
prescrito. de perdonar los pecados; esta es una falsa imputa
Aunque los nestorianos se separaron de la Iglesia cion. Segun la creencia católica, la confesion solo lie
católica en el siglo V, y los eutiquianos en el VI, con ne virtud como parte del Sacramento de la penitencia,
servaron la práctica de la confesion auricular; toda - y en tanto que va unida á la contricion ó al arrepen
via subsiste entre ellos, aunque algunas veces la ha limiento de haber pecado, y á la resolucion de no
yan interrumpido. En vano nuestros adversarios han volver á pecar y de satisfacer á Dios y al prójimo.
querido poner en duda este hecho; está probado por Por un lado, los protestantes ecsageran la dificul
testimonios y monumentos irrecusables. Cómo se atre. tad de la confesion, les parece una práctica capaz de
ven á sostener que es una invencion nueva de la atormentar la conciencia; por otro los incrédulos po
 CON 77 CON
nen en ridículo la facilidad con que son absueltos los Paris, y en 178 el papa Sisto IV confirmaron esta
mayores pecadores, apenas se confiesan : contradi decision, y siempre ha sido seguida por el clero de
cion palpable. -
Francia. Tal es evidenlemente el sentido del concilio
Siendo la confesion humillante y dificil, un peca— de Letrati, puesto que exige al que quiera confesarse
dor no puede fácilmente resolverse á hacerla, á, no con un sacerdote estraño, obtenga el permiso de su
estar arrepentido y resuelto á reconciliarse con Dios; propio sacerdote. Ciertamente que no puede dar este
pero esta dificullad está bien compensada con la es periniso todo sacerdote aprobado, y por sacerdote es -
peranza de ser absuelto y purificado; luego es un abu traño no entendió el concilio un sacerdote no aproba
so considerar la confesion sola y separada de las dis do; ningun permiso pudiera suplir á la falta de apro—
posiciones esenciales de que debe estar acompaña bacion. No obstante, esto no quita á los obispos el
da y de la absolucion que la debe seguir. derecho de conceder á todo sacerdote aprobado para
Sostienen nuestros adversarios que no son los que su diócesis la facultad para oir las confesiones pascua
se confiesan los de costumbres mas puras; que hay les, sin que les sea necesario un espreso permiso de
menos vicios entre los prolestantes desde que han los curas.
abolido la confesion. Doble falsedad. Todos los que se El mismo concilio de Letran declaró que el secreto
entregan al desórden empiezan, por abandonar la de a confesion es inviolable en todos los casos y sin
confesion, y vuelven á ella cuandó quieren conver escepcion alguna. Efectivamente, es de derecho natu
tirse. El motivo que mas de una vez ha obligado á ral, puesto que el bien de la sociedad cristiana asi lo
los protestantes á desear el restablecimiento de la exige: sin esta seguridad ¿qué pecador reo de gran
confesion entre ellos, ese desarreglo de las costum— des crimenes querria confiarlos á un confesor? Aun—
que no haya ninguna ley divina positiva que prescri
bres que se siguió á la abolicion de , esta práctica;
muchos de sus escritores han convenido en este he ba el secreto inviolable, es increible que Jesucristo
cho esencial, y confesado que su pretendida reforma impusiese á los pecadores el yugo de la confesion con
tiene gran necesidad de ser reformada. el peligro de deshonrarse á si mismos; ni aun exigió
IIan objetado que muchos malvados se han confe la declaracion formal de aquellos á quienes concedia
sado antes de cometer sus crímenes, y que otros se el perdon, porque conocia su interior. En cuanto á la
confiesau para paliar sus desórdenes bajo una apa ¿ eclesiástica que impone al confesor el silencio ab
riencia de piedad, y conservar su repulacion. Fuera soluto, es muy antigua puesto que en el siglo IV se su -
de la incertidumbre de todos estos hechos, que no es—
primieron los penitenciarios, porque un crimen con—
tan probados, responderemos que de aqui solo se in fesado al de Constantinopla se hizo público, y fue cau
fiere que los malvados pueden abusar de todo, y que sa de escándalo. - -

en nada el ejemplo de los mónstruos puede servir de Es, pues, muy estraño que en el Diccionario deJu
regla. Se ha comparado el número de los que han abu risprudencia se asiente que es necesario esceptuar del
sado de la confesion con la multitud de los que han secreto de la confesion el crimen de lesa-majestad res
renunciado á ella para pecar con mas libertad? Los peclo del primer gefe, es decir, las conspiraciones tra
que se confesaron antes de cometer una mala accion madas contra el rey ó contra el Estado, y que el con -
no la miraban como un crimen; luego no la han de fesor seria culpable si no las revelase. Sostenemos con
clarado á su confesor. -
todos los teólogos, que al contrario, lo seria mucho
El concilio de Letran, celebrado el año 1215 , bajo mas si lo hiciese. ¿Qué criminal se acusaria en el tribu
Inocencio III, canon 21, manda á todos los fieles de uno nal de la penitencia de semejante crimen, sabiendo
y otro secso llegados á la edad de discrecion, confesar que el confesor tenia obligación de revelarlo al magis.
todos sus pecados al menos una vez al año á su pro trado? Solo el escudo inviolable de la confesion puede
pio sacerdote.... Y si alguno por justa causa quisie - estimularle á acusarse de él, poniendo al confesor en
se confesar sus pecados á un sacerdote estraño, pedirá estado de separarle de su atentado, hasta de obligarle
y obtendrá el pérmiso del propio sacerdote,, porque negándole la absolucion, á evitar su ejecucion con
sino este estraño no podrá absolverle ni condenarle. consejos indirectos ó de otro modo. La opinion del ju—
Este canon dió motivo á los proleslantes para sostener risconsulto á quien refutamos, lejos de asegurar á los
que la confesion sacramental es invencion del papa reyes y al Estado, los pone en el mayor peligro. En -
Inocencio III, y que no data mas que desde el si rique IV lo comprendió perfectamente, cuando el pa
glo XIII: hemos probado ya lo contrario. dre Colton, su confesor, le espuso estas razones.
Pero aun entre los católicos se ha disputado qué es El autor del diccionario se dejó seducir por uno de
lo que el concilio de Letran entendió por sacerdote nuestros filósofos que escribió que en 1610, tres me—
propio y sacerdote estraño. Mas de una vez han que ses despues de la muerte de Enrique IV, el parlamen
rido sostener los religiosos que el sacerdote propio es; to de París decidió por un decreto que el sacerdote,
no solo el cura, sino todo confesor aprobado, y alcan. que sepa por la confesion una conspiracion contra el
zaron muchas bulas de los papas que asilo declaraban. rey y el Estado, debe revelarla á los magistrados. Si
En 1321, Juan XXII condenóá la relractacion pública fuese cierto este decreto, se deberia atribuir á falta
á Juan de Poillis, doctor de París, que sostuvo lo con de reflexion, y á la consternacion que se esparció por
trario. Fleury, Hist. eccles., l.92, S. 5. el reino con la muerte funesta de este buen rey.
Sin embargo, el año 1280 un sínodo de Colonia, y Pero cómo dar é á un escritor tan célebre por sus
el 281 un concilio de París, compuesto de veinte mer tiras, y que al mismo tiempo añade otra impos—
cuatro obispos y de un gran número de doctores, ha tura? Dice que Paulo IV, Pio IV, Clemente VIII, y en
bian decidido ya la cuestion á favor de los curas. Tam 1622, Gregorio XV, obligaron á los confesores á de
bien en 151 y en 1456, la facultad de teologia de latar á los inquisidores á aquellos á quienes sus pe
TOMO l. (36
 CON (78 CON
nitentes acusaban en confesion de haberles seducido y 3." La confesion anglicana, redactada en un síno
solicitado al crimen, en el tribunal de la penitencia. do de Lóndres el año 1562, y publicada en el reinado
Esta es una falsedad calumniosa; he aquí lo que estos de Isabel el año 1571.
pontífices mandaron. Cuando una penitente declara ..." La de los escoceses, hecha en 1568 en una
á su confesor que ha sido solicitada al crimen en la asamblea del parlamento de este reino.
confesion aun por otro, ordenan que el confesor obli 5." La confesion belga, compuesta en 1561 por
gue á su penitente á revelar á los superiores eclesiás las iglesias de Flandes, aprobada en sus sínodos en
ticos el crimen del confesor culpable; pero no imponen 1579, y confirmada en el sínodo de Dordrecht en 1619.
al confesor la obligacion de hacer por sí mismo esta 6." La de los calvinislas polacos, hecha en un sí
revelacion: no puede ni debe hacerla nunca. La ley nodo de Czengel el año 1570.
que establecen es contra la seguridad de los confeso 7." La llamada de las cuatro ciudades imperiales,
res, y no contra la de los penitentes; pero el filósofo á saber: Strasburgo, Constanza, Meninga y Lindau,
confundió maliciosamente la revelacion hecha por una presentada á Carlos V el año 1530 al mismo tiempo
penitente con la que hace un confesor, para tener un que la de Augsburgo,
prelesto para decir que hay una contradiccion absur La segunda parte de la coleccion contiene las con—
da y horrible entre esta decision de los papas y la del fesiones de fé de las iglesias luteranas y las que con
concilio de Letran, y una oposicion espresa entre nues ellas tienen mas relacion.
tras leyes eclesiásticas y nuestras leyes civiles. Nada 1." . La confesion de Augsburgo, compuesta por
hay aqui absurdo y horrible, esceptuando la mala fé Melanchthon en 1530, y presentada á Carlos V por
del filósofo de la q le ha sido juguete un jurisconsulto. muchos príncipes del imperio en la dieta celebrada en
Sabido es que en 1383.S. Juan Nepomuceno prefi esta ciudad.
rió sufrir tormentos crueles y la muerte, á revelar al 2." La confesion sajona, hecha en Wirtembergen
emperador Venceslao la confesion de la emperatriz su 1551 para presentarla al concilio de Trento.
esposa. S. Juan Climaco habia ya dicho en el siglo VI: 3.º. Otra redactada en la misma ciudad en 1552,
«Jamas los pecados confesados en el tribunal de la y que fué en efecto presentada al concilio de Trento
enitencia han sido divulgados. Dios lo permite asiá por los embajadores del duque de Wirtemberg.
n de que los pecadores no se aparten de la confesion º La de Federico, elector palatino, que murió
y no se vean privados de la única esperanza de sal el año 1566, y publicada en 1577, segun por su tes—
vacion que les queda». Epist. ad Parton., c. 13. Véase lamento lo habia mandado.
PENITENCIA. 5." La confesion de los bohemios ó valdenses,
CONFESION DE FE. Declaracion pública y por aprobada por Lutero, por Malanchthon y por la aca
escrito de lo que se cree. Los concilios formaron con demia de Wirtemberg en 1532, publicada por los se
fesiones ó profesiones de fé, que tambien se han lla ñores y presentada á Fernando rey de Hungria y de
mado símbolos, para distinguir la doctrina católica de Bohemia, en 1535.
los errores; tambien los herejes las han hecho para es 6." La declaracion titulada Concensus in fide etc.
poner su creencia. En el concilio de Rimini presenta compuesta por los ministros de las iglesias de Polo
ron los arrianos á los obispos católicos una fórmula ó nia en un sínodo de Sendomir en 1570.
confesion de fé, con la fecha del 22 de mayo de 359, Despues están los decretos del sínodo de Dordrecht,
en el consulado de.... y querian que se contentasen celebrado en 1718 y en 1619.
con ella sin ningun miramiento á los decretos de los En fin la confesion de fé que los protestantes reci
concilios, ni á las fórmulas precedentes. Por la inscrip bieron de Cirilo-Lucar, patriarca griego de Constan
cionó la fecha conocieron los obispos católicos que tinopla, 1631. Esta multitud de confesiones de fe,
era la última fórmula de Sirmich, enteramente mala; hechas por los protestantes en el espacio de cuarenta
la desecharon y se burlaron de la inscripcion. Sócra— años, dá lugará muchas reflecsiones.
les, Hist. eccles., libro 2, c. 37. En primer lugar, no vemos de qué puedan, servir
La mayor parte de los herejes han variado, como á unas sectas que todas sostienen que la Sagrada Es
los arrianos, en sus confesiones de fe; jamás han podi critura es la única regla de é; que los hombres no
do avenirse todos los sectarios, ni satisfacerse á sí tienen derecho para añadirla nada; que no tienen
mismos, y frecuentemente se ha hecho este cargo á or sí ninguna autoridad las decisiones de los conci
los protestantes en particular. Han hecho una colec— ios y de los sínodos; que solo se deben obedecer en
cion de sus confesiones defé dividida en dos partes: la cuanto esten conformes con la Sagrada Escritura;
primera contiene siete, á saber: -
que aun despues de haberlas suscrito se puede con
1." . La confesion helvética, hecha por las iglesias tradecirlas, desde que se note que su doctrina no está
protestantes de la Suiza. Ya habian formado una en en armonia con la palabra de Dios. Obligando á los
Basilea en el año 1536; pero pareciendo poco estensa articulares á suscribirlas, y á los ministros á con—
redactaron otra en 1566;á la que pretenden que sus— ormarse con ellas, han echado por tierra los proles
cribieron ó asintieron todas las iglesias calvinistas, tantes el principio fundamental de la reforma. En va
no solo de la Suiza y de los Grisones, sino tambien la no argumentariamos contra ellos sobre su pretendida
Inglaterra, la Francia, la Escocia y Flandes. profesion de fé, siempre nos podrian responder: «asi
2." . La que los calvinistas franceses presentaron á opinaban nuestros padres, pero nosotros no pensamos
Carlos IX en el coloquio de Poissy el año 1561, com hoy del mismo modo«. -

puesla por Teodoro de Beza; la suscribieron la reina En segundo lugar, si la Sagrada Escritura está
de Navarra, Enrique IV su hijo, el príncipe de Condé, clara, terminante, suficiente sobre todos los puntos
el conde de Nassau, etc. de fé, como pretenden los protestantes, es un aten
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tado por su parte atreverse á añadirla cosa alguna, ó hecho mucho honor. Este patriarca, que estudió en
querer reformar las espresiones; se lisonjean de ha Italia y viajó por Alemania, se aficionó á las opi
blar mejor que el Espíritu Santo. Una esplicacion niones de los protestantes, y quiso introducirlas en
cualquiera no es la palabra de Dios, sino la de los su Iglesia cuando subió á la s de Constantinopla.
hombres. Es de estrañar que ninguna de estas sectas Su mismo clero y los demas obispos griegos se opu
se haya limitado á copiar los pasajes de la Escritura sieron á ello. Despues de haber sido arrojado y res
Sagrada para dar testímonio de su fé. Si los primeros tablecido cinco ó seis veces, fue puesto én prision y
que compusieron su confesion en 1530 comprendieron ahorcado por orden del gran señor en 1638. Sus er
bien el sentido de la Sagrada Escritura, ¿cómo nin rores fueron negados y condenados por Cirilo de Be
guna secta ha querido atenerse á ella, y por qué ha rea su sucesor, en un concilio de Constantinopla ce
sido necesario volverá ella de nuevo? lebrado el mismo año, al ¿ asistieron Metropha
En tercer lugar, cualquiera que se tome el trabajo nes, patriarca griego de Alejandria, y Theophanes,
de comparar estas confesiones verá que, lejos de ha patriarca de Jerusalen. Tambien fueron condenados
ber establecido la uniformidad de creencias entre las en un sínodo de Jassy en Moldavia; en otro concilio
diferentes sectas protestantes, prueban por el contra de Constantinopla en 1642; en un sínodo de Leuco—
rio la oposicion de sus sentimientos. Asi, desde esta sia, ciudad de la isla de Chipre, en 1668; en un sí
época no han estado mas acordes los luteranos con los nodo de Jerusalen; en los patriarcados de Nectario
calvinistas; ni unos ni otros se han unido con los an y Dositeo en 1672; y muchos teólogos griegos los
glicanos; los socinianos y otras sectas han constituido refutaron en obras compuestas con este objeto.
tambien bando aparte. Si todas pensasen del mismo Apenas se habia impreso en Ginebra la confesion
modo, una sola profesion de fé bastaria para todas, de Cirilo-Lucar en 1633, cuando Grocio y muchos
asi como las decisiones del concilio de Trento han teólogos luteranos se burlaron de ella, porque habia
bastado y bastan todavia para reunir á todos los ca sido copiada de las instituciones de Calvino. Mas de
tólicos en una misma creencia. En vano se nos res 50 años antes, Jeremias, predecesor de Cirilo-Lucar,
0nderá que todos los protestantes están acordes en habia refutado la confesion de Augsburgo, que le ha
a creencia de los artículos fundamentales ; si esto bian enviado los teólogos de Wirtemberg. Puede ver
basta no han tenido razon en poner otros artículos en se por los diversos monumentos reunidos en la Per
las confesiones de fé; debieron limitarse á decir: cada petuidad de la fé, que nunca han estado los griegos
uno creerá lo que le parezca revelado claramente en en los mismos sentimientos que los protestantes so—
la Escritura Sagrada. Bossuet, en su Historia de las bre ninguno de los artículos por los que estos se se
Variaciones, ha demostrado la inconstancia, las equi pararon de la Iglesia romana. V. GRIEGos.
v0caciones y las contradicciones de todas estas confe
siones de fé. CONFESION, Segun la liturgia y la historia ecle—
En cuarto lugar, habiendo tenido cada una de es siástica era un lugar en las iglesias, ordinariamente
tas sectas la facultad de hacer una declaracion de fé colocado bajo el altar mayor, en el que descansaban
particular, no concebimos por qué se niega al con los cuerpos de los mártires ó de los confesores. Es cé
cilio de Trento el derecho de hacer una estensa pro— lebre la confesion de S. Pedro situada en la iglesia de
fesion de la creencia católica. Si los protestantes se Roma que lleva su nombre.
alaban de fundar su doctrina en la Sagrada Escritura,
este concilio tambien apoya en ella la suya, ha cita Confesionistas. Llamaban asi los católicos en
do los pasajes como los protestantes; falta saber si es las actas de la paz de Wesfalia, á los luteranos que
tos últimos han sido mejor iluminados que él por el seguian la confesion de Augsburgo.
Espíritu Santo, para entender su verdadero sentido.
Nos parece que un protestante particular se vería muy Confesor. Cristiano que ha profesado pública
embarazado á la vista de trece ó catorce confesiones mente la fé de Jesucristo, que ha padecido por ella,
de fé para saber cuál es la mejor. y que está dispuesto á morir por esta causa: se dife
Han hecho á la del concilio de Trento argumentos rencia del mártir en que este padeció la muerte por
contradictorios. Por un lado dicen que decidió como dar testimonio de su fé. Estos dos nombres están mu
artículos de fé muchas opiniones sobre puntos oscu chas veces confundidos en la Historia eclesiástica;
ros y difíciles, en los que cada uno puede creer segun pero generalmente se llaman confesores los que, des
mejor le pareciere. Por otro se lamentan de que es pues de haber sido atormentados por los tiranos,
presó muchas cosas de una manera ambigua, á cau han sobrevivido y muerto en paz; y los que, sin ha
sa de los debates que median entre los teólogos. Asi ber padecido tormentos, han vivido santamente y
los protestantes están descontentos porque el concilio muerto en olor de santidad.
decidió muchos artículos, y porqne decidió pocos; No se llamaba confesor, dice S. Cipriano, al que por
y encuentran muy reprensible que los papas hayan sí mismo se presentaba al martirio sin ser llamado;
esplicado con bulas lo que no estaba claramente es se le apellidaba profesor; pero este celo no era apro
presado en los decretos del concilio. Mosheim, His bado por la Iglesia. «No aprobamos, decian en el
toria eclesiástica del siglo XVI, seccion 3, 1.° parte, siglo II los fieles de Smirna, á los que así mismos
c. 1, SS. 23 y 2%. ¿ Cómo satisfacer á semejantes se ofrecen al martirio, porque el Evangelio no lo
CenSoleS ? manda así, » Epist. Eccles. Smyr., n. . En efecto,
En cuanto á la confesion de fé de Cirilo—Lucar, que Jesucristo dice á sus apóstoles: «Cuando seais perse
los protestantes pomposamente han titulado confesion guidos en una ciudad, huid á otra.» Mat., c. 10,
de fé oriental, sabido es que este asunto no les ha y. 23. S. Clemente de Alejandria dice, que el que
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por sí mismo se presenta á los jueces, imila la teme res con mayor eficacia que la confianza; si el mayor
ridad de los que provocan á un animal feroz, y se número de los que perseveran en el crímen conti
hace reo del crímen del que le condena á muerte. nuan en él por la esperanza y no por la desespera
Strom., lib. I, c. 10, p. 597 y 598. Un concilio de cion; si los mas rígidos predicadores son los que ga
Toledo prohibió conceder los honores del martirio á nan mas almas á Dios.
los que se presentasen por sí mismos. Es, pues, falso Conocemos un Judas condenado por la desespera—
que los PP. inspirasen á los cristianos el analismo cion; la Escritura no nos enseña ningun pecador en—
del martirio, como los incrédulos se han atrevido á durecido por un esceso de confianza en Dios. San Pe
decir. dro cayó porque habia confiado en sus propias
Si alguno, por temor de faltar al valor y de renun fuerzas y no en la bondad de su Maestro. Jesucristo
ciar á la é, abandonaba sus bienes, su pais, etc., le hizo volver en sí por una mirada de ternura, y no
y voluntariamente se desterraba, se le llamaba eactor por un semblante airado. S. Agustin permaneció en
ris desterrado. el desórden, en tanto que desconfió de la gracia, y
CONFESOR. Es tambien un sacerdote secular ó re salió de él animado por la confianza. S. Pablo nos
gular que tiene facultad para oir la confesion de enseña que los paganos se entregaron á la impudici
los pecadores absolverlos en el sacramento de la dad por desesperacion. Eph., c., y . 19,
penitencia. Se le llama en latin confessarius para dis Sobre este punto importantísimo de la moral, es
iinguirle de confesor, nombre consagrado á los santos. necesario consultar á los hombres encanecidos en los
Se comprende bien, cuán delicado, peligroso y te— trabajos del sagrado ministerio y no á los doctores
mible es el cargo de confesor respecto de todos los º no conocen mas que los libros y el gabinete. Cuan
fieles sin escepcion; cuántos conocimientos y virlu o alguno de ellos haya convertido tanto pecadores
des exige, y se debe reconocer la sabiduria de las con sus escritos como S. Francisco de Sales con la
precauciones que toman los obispos para no admi dulzura de sus mácsimas y el atractivo invencible de
tirá ninguno sino despues de un riguroso examen. su caridad, merecerá que le tomemos por maestro.
Pero Jesucristo nos manda desconfiar de los fariseos
Con lanza en Dios. Hablando con propie que ponen en los hombros de otros un peso insopor—
dad, es lo mismo que la esperanza cristiana; asi no table, y no quieren moverlo siquiera con el dedo.
debemos dudar que es un deber, para nosotros el Mat, c. 23, y. .
confiar en la misericordia infinita de Dios, y dester
rar toda inquietud relativa á nuestra salvacion, Nues Confirsanacion. Sacramento de la nueva ley
tra religion, imprimiéndonos el augusto carácter de que da al fiel bautizado, no solo la gracia santificante
hijos de Dios, nó tiende á otra cosa que á inspirar— los dones del Espíritu Santo, sino gracias especia
nos hácia este bienhechor soberano la misma con es para confesar valerosamente la fé de Jesucristo.
fianza que los buenos hijos tienen en su padre, cuya Se administra por la imposicion de las manos y por
ternura siempre han esperimentado. la union del santo crisma sobre la frente del bauti
Para dar valor á sus apóstoles les dijo Jesucristo: zado. -

«Tened confianza; yo he vencido al mundo.» Joan., Por esto disputan los teólogos para saber cuál de
. 16, y . 33. S. Pablo exhorta a los fieles que no estas dos acciones es la materia esencial y principal
pierdan su confianza, á la que va unida una gran re de este sacramento; unos han pensado que era la
compensa. Habr. c. 10, y. 33 Representa el temor primera, otros que la segunda: la opinion mas ge
omo el carácter distintivo de los judios. Rom., c. 8, neral es que ambas son necesarias para la integridad
y. 15. S. Juan dice que el que tiene esperanza en Dios del sacramento, en consecuencia, que la oracion , que
cs santificado, como es santo el mismo Dios. 1. Joan., acompaña á la imposicion de las mános y las palabras
c. 3, y. 3. Es, pues, engañarse miserablemente el unidas á la uncion constituyen igualmente parte de
querer santificar las almas inspirándoles un temor la forma. La confirmacion es uno de los tres sacra—
escesivo de los judios de Dios, mas bien que una fir— mentos que imprimen carácter.
me confianza en su bondad. En la Iglesia griega y en las demas sectas orienta
Jesucristo, los apóstoles, los antiguos PP., los les se confiere este sacramento inmediatamente des
hombres apostólicos de todos los siglos no trataron pues del bautismo, y se administra como en la Igle
de atemorizar á los pecadores, sino ganarlos por la sia romana por la úncion del santo crisma; en lugar
confianza, hicieron muchas promesas y pocas ame— de que entre nosotros dice el obispo al confirmado, yo
nazas; perdonaron á todos, y no desanimaron á na te señalo con el signo de la cruz y te confirmo con el
die; hablaron con energía, y muchas veces de la bon - crisma de la salud, en nombre del -Padre etc. los
dad de Dios, de su paciencia con los pecadores, de griegos dicen: Este es el signo ó el sello del don del
la caridad de Jesucristo, de la eficacia de la re Espíritu Santo.
dencion, del perdon prometido al género humano, Los protestantes que desechan este sacramento como
de la recompensa eterna y raras veces de la conde una institucíon nueva, pretenden que no se habla de
nacion. Los que están encargados de enseñar pueden él en la Sagrada Escritura; sº engañan. Jesucristo,
seguir mejores modelos? Juan..., c. 1, y . 16, dice á sus apóstoles: «Ro
Sin duda se dirá que en un siglo perverlido esce garé á mi Padre, y os dará otro consolador á fin de
sivamente, no es á propósito para inspirar confianza que habile siempre con vosotros : este es el espí
l

sino lerior. Sin comparar el cuadro de nuestró siglo ritu de la verdad, etc». Cap. 17 , , y . 20, dijo á su
con el que los PP. de la Iglesia trazaron del suyo, Padre hablando de los apóstoles: «Noruego solam en
preguntamos si el temor convierte á los pecado- te por ellos, sino por todos los que creerán en mí por
 CON k.81 CON
su palabra». En las Actas, c. 2, y.88, S. Pedro di 132, dice: «que si alguno en la hereja y fuera de la
ce á los que le escuchaban: «Que cada uno de vos Iglesia ha podido recibir la remision de sus pecados
otros reciba el bautismo, y recibireis el don del Espí por el bautismo, tambien ha podido recibir el Espí—
ritu Santo, porque la promesa os considera á vos— ritu Santo, y que no hay mas necesidad cuando vuel
otros y á vuestros hijos y á todos los que todavia estan ve que imponerle las manos y signarle para que re
separados, pero que el Señor nuestro Dios llama— ciba el Espíritu Santo. Asi que, nuestra costumbre,
rá». En efecto, c. 8, y. 17 y c. 19, y. 6, «los apósto— dice, es que los que se han bautizado en la lglesia se
les imponian las manos sobre los bautizados, y les presenlen á los obispos, á fin de que por nuestra ora
daban el Espíritu Santo». Hé aqui, pues, la promesacion y la imposicion de las manos reciban el Espiritu
del Espíritu Santo hecha por Jesucristo á todos los Santo y sean señalados con el signo del Señor.» Lo
fieles, seguida de la ejecucion, y un rito puesto en uso
repite, Epist.7 al Pompejum, p. 139. El papa Cor
por los apóstoles para producir su efecto. nelio, en una de sus cartas dice de Novaciano que
No es cierto que el Espíritu Santo dado por la im despues de su bautismo no fué signado por el obispo;
posicion de las manos de los apóstoles haya sido úni que por la'ta de este signo no pudo recibir el Espíritu
camente el don de lenguas, el de profecía y el de los Santo, Euseb., l. 6, c. 3, p. 313.
milagros. Jesucristo habia prometido el Espíritu de Podríamos citar en el siglo IV los concilios de El—
verdad. S. Pedro prometia á todos los fieles el Espí— vira, de Nicea y de Laodicea, á Optato de Milevi,
ritu Santo, y todos no recibian los dones milagrosos. S. Paciano de Barcelona, S. Cirilo de Jerusalen, San
La uncion de que habla S. Juan es el conocimiento Ambrosio y S. Juan Crisóstomo; en el W. S. Geróni
de todas las cosas, y no el poder de hacer milagros. mo, el papa Inocencio I, S. Agustin, S. Cirilo de Ale
Segun S. Pablo, los frutos ó los efectos del Espíritu jandría, Teodoreto, e'c. El P. Drouin, de re sacram.,
s son todas las virtudes cristianas. Gálat., c. 5, t. 3, ha referido sus pasajes y los de los siglos si
y. 22. guienles.
Los protestantes han faltado tambien á la verdad Los protestantes pretenden que estos PP. hablan de
cuando han asegurado que no hay ningun vestigio una uncion que formaba parte de las ceremonias del
del sacramento de la confirmacion en la tradicion de bautismo y no de un sacramento diferente; pero ade
los primeros siglos. Mosheim, mas instruido que lo mas de que es evidente lo contrario por la sola fuerza
general de sus escritores, con viene que desde los pri de las palabras, todavia serian culpables los protes
meros siglos los obispos, concediendo a los ancianos tantes por haber quilado del bautismo una ceremonia,
ó sacerdoles el bautizar á los nuevos convertidos, se á la que se atribuia la virtud del Espíritu Santo. ¿No
reservaron el derecho de confirmar el bautismo. Cist. es un absurdo suponer que el bautismo podia adminis
ecºl. del primer siglo, 2 º parte, c., S.8; necesi trarse por un sacerdote, por un diácono, por un lego,
taba decir el confirmar en la fé á los fieles bautizados. y que una simple ceremonia no podia hacerse sino
S.Gerónimo, Dial. contra Lucifer, asegura que es por el obispo, aunque ésta no fuese un sacramento
te era el uso de su tiempo: el concilio de Elvira cele diferente ?
brado á fines del siglo III ó á principios del IV lo Por esto mismo es evidente que el concilio de Tren
mandó asi. - to ha seguido la primitiva al cuando ha deci—
En el II, S. Teófilo de Antioquia, l. 1, ad Autol., dido, sess. 7, can. 3, qne el ministro ordinario de la
n., 12, dice que nos llamamos cristianos porque re confirmacion es solo el obispo, y no el simple sacer
cibimos la uncion de un aceite divino. S. Ireneo, dote. Esta tradicion no es menos constante que la que
Ado. har, lib. 1, c. 21, n. 3, dice de los valenti establece la materia, la forma, los efectos del sacra
nianos, que despues de haber bautizado á su mane mento y el carácter que imprime al cristiano, etc.
ra á los neófitos, les hacian una uncion con bálsamo; Cuando se ha ecsaminado esla cuestion, ¿qué de
esto era una imitacion de lo que se hacia en la Iglesia bemos pensar de las falsas aserciones, de las impos
católica. turas y de las puerilidades que sobre esto ha reunido
En el tercero, Tertuliano, I. de Bap., c. 7, dice: Basnage? Hist. de la Iglesia. l. 27, c. 9. No merecia
«Al salir de las fuentes bautismales, recibimos la un— esto, despues de doscientos años, renovar las pruebas
cion de un aceite bendito siguiendo el antiguo uso de la ignorancia afectada y de la mala fé de Calvino.
de consagrar los sacerdotes con una uncion; esta un En la Iglesia griega, el mismo sacerdote que admi
cion no loca mas que la carne, pero obra un efecto nistra el bautismo, administra tambien la confirma
espiritual. Despues se nos imponen las manos, invo cion, y segun Lucas Holstenio, esta costumbre de la
cando por una bendicion el Espíritu Santo. Lib. de Iglesia oriental es de la mayor antigüedad. Segun la
Resur. carnis, c. 8. La carne es bautizada, á fin de opinion de los teólogos católicos, los presbíteros pue
que se purifique el alma; la carne recibe una uncion, den administrar la confirmacion como delegados de
un signo, una imposicion de manos á fin de que sea los obispos; pero estos son los ministros ordinarios.
consagrada el alina, fortalecida é iluminada por el El concilio de Ruan manda que el que administre la
Espíritu Santo». Lib. de Praescript, c. 10, dice que confirmacion y el que la reciba esten en ayunas. Son
el demonio, mono de la divinidad, hace imitar por edificantes las ceremonias y las oraciones que acom
los idólatras los divinos sacramentos y los hace bau pañan á la administracion; se pueden ver en el ponti
tizar, señalar en la frente y celebrar la ofrenda del fical y en los rituales. Véase el antiguo sacramentario
pan. Lib. 1, contra Marcion., c. 1, añade tambien por Grandcolas, 2." parte, p. 1 y 193.
la uncion de los fieles al bautismo y á la Eucaristía, y Este sacramento, sobre todo, era necesarioen tiempo
los llama sacramentos. de las persecuciones, cuando todos los cristianos de
S. Cipriano, Epist. 73, ad Jubaianum, p. 131 y bian estar dispuestos á derramar su sangre en testi
 CON 482 CON
monio de su fé; y tampoco ha dejado de serlo des CONGREGACION DE PIEDAD. En muchas par
pues que el cristianismo se ha establecido. La fé ha roquias, tanto de las ciudades como de las aldeas, se
sido combatida siempre por los herejes, los incrédu han formado asociaciones de diferentes edades v de
los, los cristianos escandalosos, y la combaten toda ambos secsos, de hombres y mugeres, de jóvenes y
via Mas la gracia que Dios nos concede para resistir doncellas para hacerles practicar juntos ejercicios de
no es la que nos da para pelear; el verdadero celo re piedad, para darles en particular los consejos y las
ligioso ni es inquieto, ni desconfiado, ni malhechor. instruciones que les convienen, para obligarles á vi
«Dios, dice S. Pablo, no nos ha dado un espíritu de gilarse unos á otros. Este órden facilita á los pasto
temor, sino de valor, de caridad y moderacion.» res el llenar cómodamente sus deberes, conserva
2 Tim., c. 1, y.7. Injustamente es como muchos in en estas varias sociedades una emulacion laudable,
crédulos han dicho que el sacramento de la Confir y contribuye mucho al buen orden de las parroquias.
macion estaba instituido para inspirar á los cristianos Generalmente estas congregaciones, se hallan esta
un celo fanático, intolerante y perseguidor. blecidas en honor de la Santísima Virgen.
Por la misma razon se han formado en los colegios
* Confuncianos. Se deriva su nombre de Con una congregacion de alumnos, y en los conventos una
fucio, filósofo chino. Sin embargo, su doctrina no es congregacion de pensionistas, para estimularlos á la
la que está mas generalizada en la China. El bracma piedad. Como un artículo de los esenciales de la fé
nismo, modificadocon el nombre de Religion de Po, cristiana es la comunion de los santos, bueno es acos
se halla adoplado por lamayoría de los chinos. La tumbrar temprano á los jóvenes de ambos sexos á to
religion de los emperadores es la del Dala-Lama. mar su espíritu, á fin ¿ contra un culto
V. Boudismo, CHINA y DALA-LAMA. aislado, y por decirlo asi, clandeslino, que la mayor
parte de los cristianos, especialmente los grandes, fin
Congregacion. Se llama asi en Roma una gen por su comodidad. -

asamblea formada por teólogos llamados consultores, CÓNGREGACION DE NUESTRA SENORA, Or—
y presidida por uno ó muchos cardenales, para ocu den de religiosas instituida por el B. Pedro Fourcer,
parse de varios asuntos relativos al gobierño de la canónigo regular de S. Agustin, cura de Malaincourt
Iglesia. Algunas están establecidas perpéluamente, en Lorena, el que ha formado sus constituciones Esta
otras solo temporalmente. Ha habido una congrega Orden tiene mucha relacion con la de las ursulinas;
cion del concilio de Trento, destinada á resolver las se estableció en la misma época para la educacion de
dudas que podian ocurrir sobre el sentido ó el modo las jóvenes y para la instruccion gratuila de niños
de ejecutar los decretos de este concilio; subsiste to
pobres. En 1515 y 1516, Pablo V permitió á la ma
davía una congregacion de auriliis, encargada de ec dre Alix y á sus compañeras lomar el hábito religioso,
saminar si el sistema de Molina sobre la gracia era erigir sus casas en monasterios, y vivir en ellos en
ortodoxo ó herélico. V. MoLINISMo. clausura bajo la regla de S. Aguslin. Estas religiosas
Hay una congregacion de ritos, para juzgar si tal se agregaron á la Órden de canónigos regulares de la
práctica introducida en el culto es laudable ó supers congregacion del Salvador, por una bula de Urba
ticiosa, para permitiró desechar los oficios ó ceremo no VIlí, el año 1628. Tienen un gran número de mo
nias que se quieren poner en práctica, para proceder nasterios en Lorena, en algunas otras provincias de
á la beatificacion y á la canonizacion de los santos. Francia y en Alemania. La difunta reina María, prin
La congregacion de propaganda fide, se ocupa de las cesa de Polonia, les hizo edificar en Versalles un so
misiones y de los misioneros que trabajan en la berbio monasterio, al que se trasladó la comunidad
conversion de los infieles, etc. V. PRoPAGANDA. de Compieña y fue confirmada por cartas patentes
CONGREGACION. Sociedad de sacerdotes secu del rey en 1772. Estas religiosas llenan alli su desti
lares, que sin hacer votos, se reunen para emplearse no bajo la proteccion de damas de honor, herederas
en servicios de utilidad pública, como el cuidado de de la piedad de la reina su fundadora.
los colegios y semirarios, las misiones de las ciuda
des ó de las aldeas, etc. Los eudistas, los josefilas, Congregacion. (Derecho eclesiástico.)
los lazaristas, los oratorianos, los de S. Sulpicio, etc., Esta palabra tiene diversos sentidos. Por lo general
son de este número. La utilidad de estas congregacio sirve para designar una corporacion cualquiera, es
nes es de proporcionar establecimientos, sólidos, y pecialmente elesiástica. Se llaman congregaciones una
servicios más constantes, porque tienen siempre in especie de comisiones compueslas de cardenales, y
dividuos dispuestos á ocupar las plazas vacantes, Mu establecidas en Roma¿ los papas para vigilar so
chas se han establecido durante el último siglo, pero bre una parte de la administracion espiritual ólem
como el gusto del nuestro es el de destruir, si hicié poral. Hablaremos ahora de esta especie de congrega
semos caso de nuestros filosofos políticos, quizá no se cion, y trataremos luego de las congregaciones ecle
dejaria subsistir ninguna. siásticas.
CONGREGACION DE RELIGIOSOS. Cuando se CONGREGACIONES DE LOS CARDENALES. Se
introdujo la relajacion en las órdenes monásticas, llaman asi, como hemos dicho, las diferentes seccio
cierto número de religiosos, que querian abrazar la nes de cardenales comisionados por el papa, y dis
reforma y volver al fervor de su primer instituto, se tribuidos en varias salas para despachar ciertos ne
separaron de los demas y formaron entre ellos una gocios. -

nueva asociacion bajo superiores particulares. Asilos La primera y mas antigna de estar congregaciones
benedictinos, los agustinos, los canónigos regula es la del consistorio, que no debe confundirse con el
res, etc., se dividieron en diferentes congregaciones. consistorio mismo, se compone de cierto número de
 CON (83) CON
cardenales y prelados, y de un secretario; decide las que ocurren sobre los derechos honoríficos en las
reclamaciones á las bulas que se espiden en el con iglesias.
sistorio; tiene sus abogados con el derecho esclusivo La séptima es la de la fábrica de S. Pedro, y cono
de defender las casas, y se les llana por este motivo ce de los legados para obras pias, de las cuales per
abogados consistoriales. tenece una parte á la iglesia de S. Pedro.
La segunda es la de inquisicion. El abad Fleury en su La octava solo se ocupa en objetos puramente ci
institucion al Derecho eclesiástico, tomo 11 , pág. 96 viles, como la inspeccion sobre las fuentes, el curso
de la edicion publicada por Mr. Boucher de Argis, de los rios, los puentes y calzadas. Lo mismo sucede
dice que el papa Sisto V, cuando erigió las congrega con la novena, donde el cardenal Camarlengo es el
ciones de cardenales que hay en Roma, dió la pree gefe ó presidente, tiene el cuidado de las calles y
rencia á esta, y añade que se compone de siete car— las fuentes.
denales y algunos otros jueces; que el papa la preside La décima se llama la consulta, porque es el con
siempre; que su autoridad se estiende por toda la Ita sejo del Papa, y tiene á su cargo todos los negocios
lia y por todo el orbe católico. concernientes al dominio de la Iglesia.
Otros autores dicen que se compone de doce carde La policía general ocupa la undécima, que se llama
nales; pero parece que su número depende de la de bono regimine.
voluntad del papa; la y algunos prelados teólogos de La duodécima es la de la moneda, y tiene á su car
varias Ordenes religiosas en esla congregacion , y los go, ademas de la fabricacion de las especies que cor
teólogos se llaman consultores de la inquisicion. Mr. ren en el estado eclesiástico, el fijar el precio y valor
Boucher de Argis dice, en una nota puesta en la pá de las monedas de los príncipes estrangeros.
gina 97 del tít. 2.º de la institucion del Derecho ecle— La décimatercera, que se titula congregacion de
siástico, que en ella se hace el índice espurgatorio los Obispos, se ocupa en el exámen de los que son
donde se ponen todos los libros que censura e Santo nombrados Obispos en la llalia.
Oficio. Paulo IV estableció la del índice, imponiendo El cardenal decano es el presidente de la décima
penas muy severas á los que violasen la prohibicion cuarta, que se llama de asuntos consistoriales.
de leer los libros que están contenidos en él, á saber: La de propaganda fide es la décima quinta, y ar
la escomunion, la privacion é incapacidad de cuales regla todo lo concerniente á las misiones.
uiera destinos y beneficios, la infamia perpétua, etc. En fin, la décima sesta es la congregacion de las
El concilio de Trento hizo trabajar en el índice, y limosnas, y tiene á su cargo la subsistencia de Roma
despues se aumentó este considerablemente; pero en y del estado eclesiástico.
Francia no se reconoce la antoridad de la referida Fácil es conocer por esta enumeracion que hay al
congregacion, segun dice un decreto del parlamento gunas congregaciones de cardenales que son, propia—
de Paris, espedido en el año 1647 á petición del abo mente hablando, unos tribunales ú oficinas civiles y
gado general Talon. olíticas encargadas de la administracion temporal de
La tercera congregacion de cardenales es la que lla as ciudades y provincias; cuya soberania pertenece
man de los obispos y los regulares. Conqregatio ne— al Papa. En cuanto á las que entienden en las cosas
gotiis Episcoporum et regularium praeposita. Tiene relativas á lo espiritual y á la religion, tienen auto
jurisdicion sobre los obispos y los regulares ; conoce ridad y jurisdicion en los paises de su obediencia....
de las desavenencias que ocurren entre los obispos y
sus diocesanos, y entre los superiores regulares y sus CONGREGACIONES ECLESIASTICAS. Las hay
religiosos. Los obispos se dirigen á ella para consul regulares ó seculares. Regulares son las que se forman
tarla en los asuntos árduos. Como las funciones de en une Orden religiosa, separándose una porcion de
esta congregacion ecsigen un conocimiento profundo sus miembros que, sin dejar de vivir bajo la misma
de la disciplina y leyes eclesiásticas, la compone el regla, tienen sus constituciones y superiores particula
papa de los cardenales mas instruidos en las materias res, por cuya razon no se deben confundir las Orde
canónicas; pero en Francia tampoco. se reconoce su nes con las congregaciones. La Orden de San Benito,
jurisdicion. por ejemplo, está dividida en diferentes congregacio
La congregacion de la inmunidad eclesiástica es la nes, como las de Cluni, S. Mauro, S. Vannes, etc. y
cuarla. Se estableció para decidir si deben gozar de estas deben su origen á las reformas que han introdu
la inmunidad eclesiástica los delincuentes que se re cido algunos religiosos animados de un santo celo
fugian en las iglesias, ¿ compone de varios carde para restablecer la disciplina monástica; pero no
nales que la presiden, de un procurador, de un audi pueden ser restablecidas sin los despachos reales re
tor de rota, y de un relator. ¿ en los parlamentos, y en prueba de esto
La quinta congregacion es la del concilio, estable— iremos lo que pasó en el siglo anterior con motivo
cida para resolver las dificultades que ocurren sobre de la congregacion de S. Mauro.
los decretos del concilio de Trento, que es el último Deseando abrazar la reforma algunos religiosos
concilio general. Al principio solo se erigió para ha franceses de la Orden de S. Benito, bajo una congre
cerlos ejecutar; mas Sisto V la concedió el derecho de gacion particular, como las de Monte Casino y Lore
interpretarlos. na, se dirigieron á los papas Gregorio XV y Urba
La sesta es la de los ritos, fundada por Sixto V, no VIII, los cuales á peticion del rey despacharon las
dándole el cargo de arreglar todo lo concerniente á bulas para erigir esta nueva congregacion. Sub título
las ceremonias de la Iglesia, al Breviario, al Misal, y et invocatione seu denominatione Sancti Mauri ad ins
el de ecsaminar los documentes que se producen para tar congregationis cassinensis seu Sanctae Justinae de
la canonizacion de los santos, y decidir las diferencias Padua, con la facultad de que se agregasen á ella
 CON 48. CON
los monasterios que quisieran, y eligiesen á lo menos radas de hecho que las congregaciones de la Orden
de tres en tres años un vicario general francés ad de S. Benito, sin embargo ocurre frecuentemente
illam congregationem regendam et gubernandam. Ade que los religiosos de la congregacion de Francia ob—
mns de estas b las se espidieron los despachos reales tienen curatos pertenecientes á la congrejacion de
el 15 de junio de 1631, dirigidos á las audiencias, premostratenses y vice versa , los religiosos de esta
jueces ordinarios, senescales y demas oficiales de la última obtienen los de la congregacion de Francia, sin
justicia real, y fueron registra los sin ninguna modi que se les ecsija á unos ni otros un rescripto de tras—
ficacion en el parlamento de Burdeos á 3 de mayo de lacion ; y lo mismo sucederia con las demas; pero
1632; en el de Paris el 21 de marzo de 1633; en el desde la declaracion de 1770 cambiaron las cosas en
de Dijon el 13 de junio de 1637; en el de Rennes el este punto. Los curatos pertenecientes á varias con—
17 de abril de 1638; en el de Aix el 16 de octubre gregaciones de la Orden de S. Agustin no pueden po—
del mismo año y en el de Rouen el 26 de enero de 160. seerlos mas que los religiosos de las mismas. El ar—
W. BENEDICTINOS. tículo primero de la declaracion lo dice terminan te
Estas reformas ó congregaciones nuevas necesita mente, y tenemos una sentencia con este motivo, cu
ban nuevas leyes para disponer y administrar los be yas circunstancias son bien particulares. Habiendo
neficios pertenecientes á las casas que las habian vacado por muerte el curato de Chevanne, diócesis
adoptado; y por consiguiente la jurisprudencia tuvo de Auxerre, perteneciente á un priorato de la Orden
sus alteraciones: segun los usos antiguos era preci de S. Agustin de la congregacion de Bourg-Achard,
so ser profeso de aquella casa, ó haber sido transferido nombró el priorá Fr. Berrier, que era premostralen
á ella para poseer un beneficio perteneciente a la mis se, al cual le rehusó la posesion el obispo de Auxerre,
ma; pero en el dia basta ser profeso de la Orden á dando la razon de que Fr. Berrier estaba en el caso
que pertenecen. Los religiosos de estas reformas no de la declaracion del año de 1770, y no podia obte -
hacen voto de estabilidad en un monasterio, porque ner un curato de la congregacion de Bourg-Achard.
son mas bien religiosos de una congregacion, que de Acudió este al arzobispo de Sens, el cual respondió
un solo monasterio. La voluntad de sus superiores los lo mismo que el obispo de Auxerre, contirmando su
hace andar ambulantes, trasladándolos á la comuni repulsa. Sin embargo, el obispo de Auxerre dió el cu
dad que les parece mas á propósito; y así un religio rato de Chevanne á Fr. Beceron, religioso de la con—
so de S. Mauro, puede poseer un beneficio pertene gregacion de Bourg-Achard, porque el patrono habia
ciente á las demas congregaciones de S. Benito. perdido su derecho por la nulidad de la presentacion
Mr. Piales afirma que hoy en dia es una jurispruden en Fr. Berrier. Este interpuso apelacion de la repulsa
cia constante, que siendo un religioso provisto en la que habia esperimentado, pidiendo se le autorizase
curia romana con un beneficio perteneciente á una para presentarse al arzobispo de Leon con el fin de
congregacion diversa de aquella en que profesó, no que le posesionase en él, y á Fr. Beceron se le dió
necesita mas breve de traslacion que la provision parte de la apelacion.
misma del beneficio, en la cual los oficiales de la cu El abogado general Seguier, que habló en esta
ria de Roma siempre inserlan una cláusula que ha causa, dijo que eran declarados abusos las repulsas del
bla de la traslacion de monasterio ad monosterium, y obispo de Auxerre y del arzobispo de Sens, porque
aunque se mira como inútil, es de aquellas que se estos prelados habian fallado sobre la naturaleza y
dice vitiantur, non vitiant. Parece bastante natural calidad del beneficio de Chevanne, juzgando que era
que los religiosos de una misma congregacion puedan perteneciente á la congregacion de Bourg-Achard, en
poseer los beneficios pertenecientes á ella sin breve lo cual escedian sus límites, y era usurpar la juris
de traslacion; pero no es lan facil conocer por qué no dicion secular; pero añadió que aunque habia un
se les obliga á transferirse á los religiosos cuando el abuso en esta repulsa, no por eso se debia sacar la
beneficio pertenece á olra congregacion. Dumoulin consecuencia de que Fr. Berrier debiese estar autori
nos resuelve esta dificultad, afirmando que antes de zado á sustraerse de la jurisdicion del obispo de
Bonifacio VIII p0dia por derecho comun todo reli Leon, y tomar posesion civil del curato de Chevanne;
gioso profeso poseer cualquiera beneficio de su Orden; porque la colacion que se habia hecho á favor de Fr.
Bonifacio VIII introdujo otro nuevo derecho por el Beceron era válida, pues el patrono eclesiástico ha
párrafo prohibenus del capítulo cum singula, el cual bia perdido su derecho con la presentacion nula de
se ha seguido algun tiempo en Francia, aunque no se Fr. Berrier, que era incapaz de poseer este curato
recibió el testo; pero insensiblemente se restableció como individuo de la congregacion premostratense; y
el derecho comun, fundándose principalmente en que por consiguiente concluyó diciendo, que las repulsas
es importante que los coladores tengan toda la posible de las provisiones hechas por el obispo de Auxerre y
libertad en la eleccion de los sugetos á quienes con el arzobispo de Sens se declarasen como abusos, y
fieren beneficios. La Orden de S. Agustin, asi co requirió en nombre del ministerio público que la co
mo la de S. Benito, se divide en varias congregacio
lacion que habia hecho el obispo de Auxerré en favor
nes, y aun algunas se llaman Ordenes. Las mas con de Fr. Beceron se declarase buena y, válida, y se le
siderables son las de Premostratenses, de Santa Ge mantuviese en la posesion del curato de Chevanne. La
noveva ó congregacion de Francia, de la Cancelada, sentencia del martes 20 de junio de 1775 fue en todo
de Bourg-Achard, de la Trinidad ó de los Maturinos; conforme á lo que pedia el abogado general, decla
las de Grandemont, de S. Antonio y de S. Rufo se han rando en ella que era un abuso la repulsa del ordina
suprimido hace poco. rio y del metropolitano, y la colacion del obispo de
Aunque las congregaciones de la Orden de S. Agus Auxerre como válida. Es muy singular que Fr. Ber
lin tienen menos relacion entre sí, y eslan mas sepa rier entablase este pleito ; cualquiera que fuese el
 CON 85 CON

éxito de su apelacion, era evidente, segun la decla toda autoridad eclesiástica, es lo que se llama forma
racion de 170, que no podia obtener el curato de congregacionalista ó independiente.
Chevanne; luego no tenia interés en promoverlo.
Véase en el artículo cURATo las declaraciones y des Cºn gruidad. Los teólogos admiten una especie
pachos reales concernientes á los curatos del Orden de mérito de congruidad, de cóngruo, por oposicion
de S. Agustin. - A al mérito de condignidad, de condigno V. CoNDio
El concilio de Trento en la sesion 25 de reforma— NIDAD.
ciones, c. 8, mandó que á los monasterios sujetos in
mediatamente á la Santa Sede, que no lo estan á Coñarruismo. Sistema sobre la eficacia de la
ningun capítulo general, ni tienen visitador regu gracia, inventado por Suarez, Vazquez y algunos
lar, se les obligase á reunir en el término de un ano otros para rectificar el de Molina.
en congregaciones por provincias; y no haciéndolo lé aqui el modo cómo conciben estos teólogos la
asi, que el obispo diocesano ejerciese sobre ellos la serie de decretos de Dios. 1." De todos los órdenes
jurisdicion como delegado de la Santa Sede. Quod posibles de cosas, Dios escogió libremente el que ec
si praedicta erequi non curacerint, episcopis in quo siste y en que nos hallanos. 2." En este orden quiere
run diarcesibus loca praedicta sita sunt, tamquam se Dios con voluntad antecedente, pero sincera, la salva
dis apostolica delegatis subdantur. Esto se dirige á cion de todas sus criaturas libres, con la condicion de
remediar los abusos é inconvenientes de las esencio que ellas mismas la quieran, es decir, con tal que
nes. Se adoptó igualmente por el artículo 27 de la ellas correspondan á los ansilios que Dios las dé.
ordenanza de Blois: «Que á todos los monasterios 3. Dios da con efecto á todos, sin escepcion, ausilios
que no estan sujetos al capítulo general y pretenden suficientes para conseguir la hienaventuranzá eterna.
estarlo inmediatamente á la Santa Sede, se les obli ..". Aun antes de conceder estas gracias, conoce en
gase dentro de un año a reunirse á cualquiera con virtud de la ciencia media lo que cada una de estas
gregacion de su Orden en este reino; que en ella se criaturas será ó hará, cualquiera que sea la gracia
hiciesen los estatutos y se nombrasen visitadores, y que les dé; vé cuál gracia será cóngrua ó incóngrua,
en caso de no hacerlo, proveyesen los obispos». Por tendrá ó no tendrá relacion de conveniencia con las
consiguiente, no puede haber en Francia monasterio disposiciones de la voluntad de cada una de las cria —
alguno que no reconozca emperior. La diferencia de turas en particular; y, por consiguiente, cuál gracia
este artículo con lo dispuesto en el concilio de Tren será eficaz ó ineficaz, 5." Por una voluntad puramen
to, consiste en que los obispos no deben ejercer la le gratuita, por medio de un decreto absoluto y ei
jurisdicion sobre estos monasterios sino como dele caz escoge ó elige un cierto número de estas criatu
gados de la Santa Sede, y el espíritu de la ordenanza ras, y las da con preferencia gracias cóngruas, ó cu—
es que deben tenerla como obispos jure suo propio et ya eficacia ha previsto. 6." Por la ciencia de vision,
ordinario. -
prevee cuáles serán las criaturas que merecerán sal—
Las congregaciones seculares son las que se compo varse, y cuáles son las que merecerán ser reproba—
nen de eclesiásticos seculares, llay varias en Francia, das. 7." En consecuencia de sus méritos ó de sus
que son las del Oratorio, la de la Doctrina Cristiana, deméritos previstos, decreta respecto á unas las re—
la de S. Lázaro, la de los Euditas, la de los Sulpicia compensa eterna y á las otras los suplicios del in
nos, etc. No trataremos aqui de analizar sus constitu. fierno.
ciones y su régimen porque remitimos á los lectores Segun los partidarios de este sistema, el hombre
á sus artículos peculiares, lo mismo que respecto á ayudado por una gracia cóngrua, ó que tiene una re—
las congregaciones de regulares. -
lacion de conveniencia con las disposiciones de su
Tambien dan el nombre de congregacion á las co voluntad, escogerá infaliblemente, aunque libremen
radias. Las de los jesuitas se conocian con esla de te y sin necesidad, lo mejor; el efecto de la gracia y
nominacion. (Art. del Abate Bertiolo). (Estracto del el consentimiento del hombre son pues infalibles,
Diccionario de Jurisprudencia). puesto que la ciencia media, por la cuál los ha previs
to, es infalible.
Congregaciosa alistas ortodoxos, Forman Cuando se pregunta á los congruistas en qué con—
una de las sectas religiosas mas poderosas y de mayor siste la eficacia de la gracia, responden: Si por ef
número en los Estados-Unidos. Cerca de 1300,000 cacia se entiende la fuerza que la gracia tiene de mo
individuos heredaron las creencias de los antigios pu ver y de determinar á la voluntad, proviene de la
ritanos ingleses, que arrojados de su patria vinieron gracia misma. Si se entiende el efecto que se seguirá,
á fundar la mayor parte de los establecimientos de la nacerá de la voluntad ayudada por la gracia. Si se
Nueva—lnglaterra. Esceptuando libode-Irlad, to considera la conexion que existe entre la gracia y el
dos ios estados del centro, el New-Hampshire, Mas consentimiento de la voluntad, procede de una y oira.
sachussets, Connecticut profesaron los errores cal Si en fin se entiende la infalibilidad de esta conec
vinistas, mas desecharon la disciplina sinodal de Cal sion, proviene de la ciencia media, la cual no puede
vino. Estos seclarios republicanos adoptaron el prin engañarse. -

cipio de que cada Iglesia tiene en sí misma todo lo que

necesita para gobernarse; que ninguna de ellas debe
depender de cualquier asamblea; por último, que ca
da una, salvo una union general de caridad y amor,
debe ser estrictamente soberana é independiente. Es
la forma disciplinal, ó mejor dicho, esla abolicion de
Se preguntará sin duda qué diferencia hay entre
este sistema y el de Molina. Consiste pues: 1.° En
que Molina decia que la eficacia de la gracia prove
nia únicamente del consentimiento libre de la volun—
tad, en vez de que segun los congruistas esta eficacia
viene de la congruencia de la gracia, por consiguien
TOMO 1. 67
 CON 86 . CON
de la fuerza y de la naturaleza de esta misma gra— dar al término gracia cóngrua. Algunos teólogos dis
cia. 2." Molina pretendia que el buen uso de la gra tinguen dos clases de congruidades; una intrínseca
cia, considerado como el efecto de la voluntad ó del que es la misma fuerza de la gracia, y su aptitud
ibre albedrío del hombre, no era un efecto del de para inclinar el consentimiento de la voluntad esta
creto ó de la predestinacion de Dios; los congruistas congruidad, dicen, es la eficacia de la gracia por sí
opinan que esta abstraccion es muy inútil: puesto que misma ; olra estrínseca, que es la conveniencia que
la gracia, dicen, se da en virtud del decreto de Dios, hay entre las disposiciones actuales de la volunta
y que el consentimiento del hombre es principalmen la naturaleza de la gracia. Esta última clase de ¿
te el efecto de la gracia como tambien de la voluntad gruidad, añaden,
la que es base la sola que admite Vazquez,l, yy
de suessistema.
6 del libre albedrío, es claro que este consentimiento
dimana al menos mediatamente del decreto de Dios. Si esto es cierto, Vazquez ha discurrido mal, y esta
3.° Molina sostenia que el hombre sin la gracia pue distincion no es esacta. Con efecto, puesto que la con
de hacer una accion moralmente buena y un acto de gruidad es una relacion de conteniencia, contiene
fé natural; que aun cuando estos actos no sean tales necesariamente, dos términos, á saber; tal naturaleza
como son necesarios para la justificacion, ni la me y tal fuerza en la gracia, y tales disposiciones en a
rezcan, Dios sin embargo los tiene presentes en con— voluntad; la analogia o la conveniencia debe ser mú
sideracion á los méritos de Jesucristo. Asi que los ua, pues de otro modo no subsiste ya. Esto no es di
congruistas opinan que esta doctrina se aproxima mu ficil de demostrar. Antes de dar una gracia, Dios vé
cho á la de Pelagio; que puesto que Dios dá gracias á que un sentimiento ó un motivo de amor, de recono
todos mas ó menos, es una temeridad el querer adi cimiento, de deseo de los bienes eternos, y de con—
vinar lo que un hombre puede ó no puede sin el ausi fianza es mas propio para mover la voluntad de tal
lio de la gracia. V. MoluNismo. hombre, que un sentimiento de temor, de disgusto
Segun la opinion que defendemos, dicen ademas del crímen, de vergüenza, etc.; vé que este senti
los congruistas todo cuanto S. Pablo y S. Agustin miento no será eficaz sino en lanto que tenga tal gra
enseñan respecto á la gracia, y su poder sobre el hom do de fuerza o de intensidad. Si Dios le concede tal
bre es esaclamente verdadero. Dios es quien obra en comº se necesia para el momento, ¿ se puede decir
nosotros el querer y la accion; puesto que su gracia ¿ la congruidad de esta gracia y su eficacia proce—
nos previene, ella es la que nos escila al bien, la que en únicamente de las disposiciones en que se halle
dá á nuestra voluntad una fuerza ¿ no tendria sin la voluntad de este hombre? La gracia no seria ¿
este ausilio, y que coopera con ella; por tanto la grua, si inspirase un molivo de temor donde se me—
gracia es causa eficiente del bien, no causa fisica, si— cºsila la confianza; y si el sentimiento que causa fuese
confianza.
no causa moral. Cuando el hombre hace el bien, no demasiado débil. Asi que, una gracia de
es él quien se distingue de aquel que no le hace; es ¿no es esencialineute y por su naturaleza diferente de
Dios quien por pura bondad distingue á aquel al cual una gracia de temor? ¿Una gracia fuerte, no es tam
dá una gracia cóngrua, y por lo mismo eficaz, de bien diferente por sí misma de una gracia débil. No
aquel á quien no da mas que un ausilio ineficaz; es, pues, cierto que la congruidad de la gracia pro
con este último ausilio el hombre hubiera podido ha— viene únicamente ab estrinseco de las circunstancias
cer el bien, mas no lo hubiera hecho. Por cuya ra o disposiciones en que se halla la voluntad del hom
zon no puede gloriarse de haberlo hecho; toda la bre á quien se dá. Es poco probable que Vazquez
gloria es debida á Dios. La buena obra no ha proce haya comelido esta falta de lógica.
dido de que el hombre haya querido y corrido, sino la congruidad bien entendida encierra pues esen
de la misericordia de Dios; el hombre ha sido preve cialmente tres cosas: 1.ºtal naturaleza en la gracia;
nido, escitado y sostenido por la gracia sin haberla 2.” tales disposiciones en la voluntad; 3 º el conoc:
merecido y sin haberse dispuesto á merecerla por sus miento infalible que Dios tiene del efecto que se ha
¿ fuerzas. Dios previó con anticipacion que el de seguir. Si se deja aparte una de estas piezas S8
nombre consentiria á esta gracia y seguiria el movi peca contra el principio. 3

miento de ella; pero no es esta prevision la que de Esto supuesto, se dirá; ¿quién impide á los con
terminó á Dios á dar la gracia ni á dar lal gracia gruistas el decir, como sus adversarios, que la gracia
mas bien que otra; la dió por pura misericordia, es eficaz por sí misma y por su propia" naturaleza
porque le agradó y en consideracion á los méritos de puesto que su congruidad es una consecuencia de su
Jesucristo. naturaleza? La razon es, porque para admitir la gra—
Esto no es posible, responden los adversarios de ºla elicaz por sí misma, es necesario considerarla co—
los congruistas; no concebimos cómo una causa mo— mo causa física de la accion que se deriva de ella:
ral pueda tener la influencia que pretendeis. Tanto y pºr consiguiente, segun los congruistas, es preciso
peor para vosotros, replican los congruistas; lam admitir entre la gracia y la accion una coneesión me
po o concebimos nosotros cómo una causa fisica no ºria; en vez de que ellos no reconocen en la gra
tiene una conexion necesaria con su efecto, sin des º mas que una causalidad moral, y no admiten en
truir la libertad. lé aqui á lo que se halla reducida tre la accion y la gracia sino una conecsion contin
la cuestion hace doscientos años despues de haberse gente. V. GR cia, S..
escrito volúmenes enteros por una y otra parte, y lie la vºz qracia cóngrua se ha tomado de S. Agustin.
ne visos esta cuestion de permanecer niucho en tal l. 1, ad Simplicium., q. 2, h. 13, donde el santo doc
estado. tor dice: Illi electi, qui congruentur porati, cuyus mi
Se podria quizá terminarla, si se comenzase por ºcretur (Deus) sic eum vocai, quomodo scit ei congrue
convenir de uña y otra parte en el sentido que se debe re, ut cocantem non respuat.
 CON 487) CON
. Algunos literatos, que quisieron hablar de teologia se celebra el dia dos de noviembre en memoria de
sin entender nada de esta ciencia, dijeron que es dili— todos los fieles que han fallecido: se instituyó en el
cil asignar la diferencia entre el sistema de los con— siglo XI por S. Odilon, abad de Cluni. En el artículo
gruistas y el de los semipelagianos. Esta diferencia no DIFuNros, probaremos la antigüedad del uso estable—
es sin embargo muy dificil de comprender. Segun los cido en la Iglesia cristiana de orar por los difuntos, las
semipelagianos el consentimiento futuro de la volun consecuencias que resultan de esto en favor de la so—
ciedad, la injusticia de las quejas que han hecho los
tad á la gracia, consentimiento que Dios prevee, es el
motivo que le determina á dar la gracia; de donde se protestantes contra este acto de caridad.
sigue que la gracia no es gratuita. Segun los con Desde los primeros tiempos de la Iglesia se esta—
n
bleció la costumbre de hacer la conmemoracio de
gruistas, al contrario, este pretendido motivo es no los mártires en las asambleas cristianas el dia del
solo falso sino absurdo. Con efecto al mismo tiempo
que Dios prevee que el hombre prestará su consenti aniversario de su muerle: la cuestion es saber cuál
miento á tal gracia, si se la concede, prevee tambien era la intencion de los fieles en esta práctica; nosotros
que el hombre resistirá á otra cualquiera gracia que decimos que es un testimonio del culto dado á los már
se le diese. Si el consentimiento previsto respecto á tires; los protestantes sostienen que no hay en esta
la primera era un motivo para concederla, la resisten costumbre ninguna señal ni prueba de culto. Basnage
cia prevista en punto á la segunda seria tambien un que ha tratado espresamente esta cuestion, Historia
motivo para no dar ni la una ni la otra, lo cual es ab— de la Iglesia, lib. 18, c. 7, S. 3. y sig. pretende que se
surdo. Por tanto la eleccion que Dios hace para dar obraba asi: 1.” A fin de honrar la memoria de Jos que
una gracia cóngrua mas bien que no una gracia in habian combatido por Jesucristo; asi se espresaba la
cóngrua, es absolutamente libre y gratuita por parte Iglesia de Smirna, hablando del martirio de S. Policar
de Dios, y un efecto de pura bondad, y Molina mismo po. 2.” A fin de que los fieles fuesen animados con
lo defiende asi. - este ejemplo de placer por su fé; 3." En las Cons
Si los adversarios de los congruistas han concebido tituciones apostólicas, lib.8, c. 13, se dice: Hagamos
frecuentemente mal, ó han espuesto mal su sistema, memoria de los mártires á fin de que nosotros nos ha
no es á los últimos á quienes debemos atenernos, aun llemos dignos de participar de sus combates..." San
que quizás ellos mismos no se han espresado siempre Cipriano Epíst. 12 y 39; ofrecemos sacrificios por los
con toda la precision necesaria. mártires siempre que celebramos la conmemoracion
aniversaria de su pasion. Estos sacrificios, segun Bas
Conjuracion, Exor e ismo. Palabras y ce— nage, eran las oblaciones que se presentaban en el
remonias por las que se lanzan los demonios. En la altar y se hacian para atestiguar que se conservaba
Iglesia romana para hacer salir el demonio del cuer— con los mártires la union, que en el símbolo se llama
po de los poseidos se emplean ciertas fórmulas ó exor comunion de los santos. Estas oblaciones no eran he
cismos, aspersiones de agua bendita, oraciones y ce— chas á los mártires. sino á Dios por los mártires.
remonias instituidas para este objeto. V. Exoncismo. En todos los elogios que de esto han hecho los au
Entre conjuracion y sortilegio ó magiahay esta dife tores de los tres primeros siglos, no hallamos ningu
rencía, que en la conjuracion se obra en nombre de Dios na oracion, ni ningun vestigio de invocacion dirigida
por medio de oraciones y la invocacion de los santos á los mártires. La Iglesia de Smirna dice: A mamos
para obligar al demonio á obedecer; el ministro de á los mártires, pero no adoramos mas que á Jesucristo.
la Iglesia manda al demonio en nombre de Dios; en Eusebio lib. I, c. 15. Ninguno de los autores paganos,
el sortilegio y la magia al contrario, se invoca al que han escrito contra el cristianismo, ha acusado.á
mismo demonio; se supone que obrará en virtud de los cristianos el adorar, invocar y rogar á los márti
un pacto hecho con él, que se entenderá con el hechi res. De todas estas pruebas deducen los protestantes
cero para hacer lo que este desea. que el culto de los mártires no ha empezado hasta el
Una cosa y otra se diferencian tambien de los en— siglo IV. - - -

cantamientos y de los maleficios; en estos últimos, sin Aunque esto fuese cierto, todavia presumiríamos
dirigirse directamente al demonio, se supone que obraque en el siglo IV se sabia, por lo menos lambien co
rá en virtud de tales palabras; de tales ó cuales ca—mo en el XVI, lo que era conforme ú opuesto al es
racteres, de tales ó cuales prácticas, que tienen la píritu del cristianismo; lo que Jesucristo y los apósto
fuerza de hacerle obrar. V. MAGA, ENcANro ó ENCAN ies habian mandado, aconsejado, permitido 6 prohibi
TAMIENTO. do: que en esta época Jesucristo no permitió sin du
da que su Iglesia, que hasta entonces habia manifes
Conmemoracion. Recuerdo que se tiene de tado el mavor horror á la idolatria, se hiciese de
alguno, oracion ó ceremonia destinada á renovar su repente universalmente culpable de ella. Pero tene
memoria. Entre los católicos romanos, los que mue— mos pruebas mas fuertes que una simple presuncion.
ren hacen con frecuencia mandas á la Iglesia, con la 1° Preguntamos qué diferencia debe haber en -
carga de que se dirán por ellos tantas misas ó que se tre honor y culto, entre culto religioso y honor dado
hará conmemoracion de ellos en las oraciones. por motivo de religion: cuando los protestantes hayan
Se llama tambien conmemoracion en el rezo del satisfecho á esta pregunta, quizá lleguemos á conve.
breviario la memoria que se hace de un santo ó de la nirnos, ó al menos entendernos sobre lo demas. El
feria por una antífona, un versículo y una oracion á honor dado á los nártires ciertamente no era inspi
laudes y á vísperas; y por una colecta, una secreta y rado por ningun motivo humano, por ningun interés
una post-communio en la misa. temporal, por ninguna consideracion natural; era pues
La conmemoracion de los difuntos es la fiesta que sugerido por la fé y por la religion.
 CON
88 CON
2.º, Quisieramos saber en qué consiste la comu— nunca su forma, que solo la materia tenia necesidad
nion de los santos que se queria conservar con los de ser restablecida. O este hereje se esplicó mal, ó en
mártires; segun la idea que dan de ella los apóstoles, señó un absurdo.
es la participacion ó la comunicacion mútua de las ora
ciones, de las buenas obras, ausilios, asistencia y bene consagracion. Accion por la cual se destina
ficios temporales y espirituales. Rom., c. 12, y. 13; al culto de Dios una cosa comun ó profana por medio
Galat., c. 6, y . 6; Ileb., c. 13, y . 16; l. Petri., c. , de oraciones, ceremonias y bendiciones. Es lo contra
y.8. A qué se reduciria esta comunion con los már— rio á la profanacion y al sacrilegio, que consiste en
tres despues de su muerte si no pudiesen ni orar, ni emplear en usos profanos una cosa que estaba consa
interceder por nosotros, ni socorrernos de ningun mo grada al culto de Dios. -

do? ¿De qué nos serviria? Basnage no se esplica acer La costumbre de consagrará Dios los hombres des
ca de esto. tinados á su servicio, los sitios, los vasos é instrumen
3." Nosotros decimos, lo mismo que la Iglesia de tos que deben servir para su culto es de mas
Smirna, que adoramos solo á Jesucristo, entendiendo remola antigüedad. Dios lo habia mandado enlala ley
por adoracion el culto divino y supremo, y que ama antigua, y habia prescrito en dicha ley las ceremo
mos á los mártires para qué los amaríamos, si ellos no nias que se habian de practicar.
nos amasen á nosolros? Segun S. Pablo, la caridad En la ley nueva, cuando estas consagraciones se re
debe ser mútua y esla caridad no muere nunca; sub fieren á los hombres y se ejeculan en virtud de un sa
siste pues en los mártires; nos aman, se interesan en cramento, se las llama ordenaciones; mas se llama
nuestra salvacion, la desean, se la piden á Dios; sin consagracion á la ordenacion de los obispos y á la un
eslo no tendríamos ningun motivo para amarlos. cion de los reves. Cuando se hacen solamente por me
..." S.Cipriano no habla unicamente de oblacio dio de una ceremonia instituida por la Iglesia, son
nesó de ofrendas, sino de sacrificios por la conmemora. bendiciones; la consagracion de los templos y altares
cion de los mártires, oblationes el sacrificia. Epist. 37. se llama dedicacion; esta última es la mas solemne y
Olim. 12. En las Const. apostól.l. 8, c. 12 se lee. «To mas larga de las ceremonias eclesiásticas; hablaremos
davia os ofrecemos, Señor, por todos los santos.... de ella en el artículo IGLESIA. -

apóstoles, mártires, y confesores etc.» ¿Se trata alli Un incrédulo inglés, que escribió un libro lleno de
de la Eucaristia despues de la consagracion? Basna— invectivas contra el clero, ha ridiculizado las consa
e no tenia cuidado de observarlo. Estas oblaciones
ice, se hacian á Dios por los mártires, ó porque al
graciones que se hacen en la Iglesia romana; las con
canzasen algun nuevo grado de gloria, ó para manifes
sidera como supersticiones, imposturas y fraudes pia
dosos del clero católico. Pregunta quién ha encargado
tar que la Iglesia conservaba comunion con ellos; nos— á los sacerdotes que hagan estas bellas cosas; si hay
otros decimos que era por ambas cosas. Asi, se pe— en el nuevo Teslamento un pasaje que nos ensene que
dia un nuevo grado de gloria para los mártires, por— un ser inanimado ó un silio es mas sanlo que
que tienen el poder de contribuir con sus oraciones otro alguno; que un hombre puede hacerle sa
á la salvacion de sus hermanos; se pedia á Dios la grado o comunicarle una santidad que no tiene él
comunion con ellos; y siempre hubiera sido nula esta mismo.
comunion, si los mártires no pudiesen interceder por No nos será muy penoso el satis acerle. Indepen
nosotros. Esto es lo que hace todavia la Iglesia cuan— dientemente de los testos del antiguo Testameno, en
do ofrece el santo sacrificio en honor de los mártires los que Dios habia mandado consagrar por medio de
y demas santos; esta espresion, que tanto han glo— ceremonias el tabernáculo, los altares, los vasos
sado los protestantes, nó significa mas que lo que ha destinados á su culto y aun sus sacerdotes, sus ma
visto el mismo Basnage en la práctica de la Iglesia nos y sus hábitos, y de los pasajes en que todas estas
primitiva. cosas son llamadas santas, sagradas, santuario, etc.,
5." ¿Es cierto que no hay en los monumentos de el nuevo Testamento nos presenta otros muchos
los tres primeros siglos ningun vestigio de invoca ejemplos de igual significacion. En S. Mateo, ca
cion de los mártires? Si se creia en su intercesion co
mo acabamos de probar, se deducia evidentemente la pítulo 7, y, 6; Jesucriso dice: «No deis las cosas
santas á los perros». Aqui se trata de cosas inanima
invocacion. S, Cipriano ruega á los mártires que se das. Cap. 23, y. 17, pregunla á los ariseos cuál
acuerden de él, cuando el Señor haya empezado á es mas grande, si el oro ofrecido en el templo ó
honrar su martirio. L. de laude Martyrii; por último el templo que santific a el oro; el don colocado so
hace la misma súplica á las vírgenes. L. de habitu bre el altar, ó el altar que santifica el don. Los la
cirgin. Esto al menos era invocarlos de antemano; riseos hubieran podido preguntará su vez, como el
alegaremos otras pruebas en la palabra SANTos. autor inglés, de qué santidad eran susceptibles el
oro y las ofrendas presentadas en el Templo. En es
Con on itas. IIerejes dei siglo Vl que seguian te mismo Evangelio, c. 27, y.53, en el Apocalip
las opiniones de un cierto Conón, obispo de Tarso sis, como tambien en los libros del antiguo Teslamen
(en la Naloia); sus errores acerca de la Santísima to, Jerusalen es llamada la ciudad santa. S. Pedro,
Trinidad eran los mismos que los de los tritheistas ó II. Petri, c. 1, y. 18, hablando del monte sobre el
tritheitas. Disputó contra Juan Filopón, otro secla cual acaeció la transfiguracion del Salvador, le llama
rio, para saber si en la resurreccion de los cuerpos, el monte santo.
Dios restableceria tambien á la vez la materia junta San Pablo, I. ad Tim... c. , y . 5, dice que los
menle con la forma de ellos, solamente
ó una de las
dos cosas; Conón sostenia que el cuerpo no perdia alimentos de los fieles son santificados por la palabra
de Dios y por la oracion. Llama á los cristianos en
 CON 489j CON
general los santos, no solo á causa de sus virtudes, mandado á Moises que le construyese un tabernáculo
sino ademas por su consagracion hecha á Dios en ó una tienda, y á Salomon que le edificase un tem
virtud del bautismo, les advierte que aun sus cuer plo; mucho tiempo antes Jacob habia consagrado la
pos y sus miembros son los templos del Espiritu San piedra sobre la cual habia tenido una vision miste —
to. I. Cor., c. 6, y. 16. -
riosa, y la llamó la casa de Dios; aquí fue donde edi
No necesitamos las lecciones del crítico inglés, ficó un altar por orden de Dios mismo, y donde ofre
para saber que santo, sagrado, sacrificado, etc. son ció un sacrificio. Gén., c. 28, y . 16; c. 3' y . 1. Ya
términos equivocos. Dios es santo, porque prohibe este sitio había sido consagrado por Abraham, c. 12.
y castiga toda especie de accion mala, porque manda y. 7; fue llamado constantemente Bethel, casa de
y recompensa todo acto de virtud y porque ecsige Dios y respetado en la sucesion de los siglos, hasta
un culto puro, sincero, esento de indecencia, de que fue pro'anado por Jeroboan. III Reg., c. 12.
supersticion y de hipocresia. Un hombre es santo, y. 29. Luego que el Templo fue edificado, dedicado
no solo cuando ama á Dios y practica la virtud cons ó consagrado, dijo Dios á Salomon: «He oido vuestra
tantemente, sino tambien cuando está dedicado, con súplica, he santificado esta casa; mis ojos y mi cora
sagrado y destinado particularmente al culto de Dios. zon permaneceran para siempre en ella». III Reg.,
En este sentido fue en el que dijo: «Todo hijo varon c. 9, y . 3,
primogénito será consagrado al Señor» Esla espre Dios sin duda está presente en todas partes, en to
sion se aplica al mismo Jesucristo, Luc., c. 2, y.23. do lugar oye nuestras súplicas y aprecia nuestro cul
Cuando dice á su Padre, hablando de sus discípulos lo, cuando le adoramos en espíritu y en verdad.
Joan., c. 17, y. 19: «Yo me santífico á mí mismo Joan., c. , y. 23. Mas en todo tiempo ha querido
por ellos, á fin de que sean tambien sanlificados en que hubiera sitios consagrados especialmente á su cul
verdad». Esto significa evidentemente. Yo me de to, en los que se reuniesen sus adoradores para ren
dico por ellos á vuestro culto y á vuestro servicio, á dirle sus homenages y dirigirle sus oraciones en co
fin de que ellos se dediquen tambien á vuestro culto mun, como hijos que se juntan alrededor de su padre:
y se empleen en vuestro servicio con igual sinceri este culto le es mas agradable que no un culto ais
dad; es claro que Jesucristo, santo por esencia, no ado y particular. Jesucristo confirmó esta creencia
podia adquirir una nueva santidad interior. por medio de sus lecciones y su ejemplo; oró en todas
En el mismo sentido, una cosa inanimada es santa partes, mas tambien fue á orar en el Templo; repitió
sagrada, es decir, destinada al culto de Díos: des lo que Dios habia dicho por boca de un profeta: «Mi
e este momento es respetable, y no debe emplearse casa será un lugar de oracion». Mat., c. 21, y . 13.
mas en usos profanos. La acción por la que se la Castigó á los profanadores y dijo: «Cuando dos ó tres
destina, emplea, y por decirlo, asi, se la deja se personas están reunidas en mi nombre, yo estoy en
parada, se llama consagracion, bendicion, santifica medio de ellos». cap. 18, y . 20. -

cion, segun el estilo mismo de la Sagrada Escritura: Desconfiemos de una filosofía pérfida é hipócrita,
¿hay aqui inconveniente alguno? En el origen, y que quiere separarnos del culto esterior y público,
segun la etimologia del término, consagracion no bajo pretesto de adorar á Dios en espíritu y en ver
significa ninguna otra cosa mas que eleccion, desti dad; los que la predican no adoran á Dios ni en espí
no, separacion de las cosas comunes; por el contra — ritu, ni én cuerpo, ni en verdad, ni en apariencia.
rio Act., c. 10, y. 1, comun, es lo mismo que V. cULTo, lgLEs A, etc.
impuro; y Marc., c. 7. y 15, comunicaré, hacer CONSAGRACION. Este término, tomado en un
comun, significa manchar, ensuciar. Es triste que sentido mas estricto que el precedente, , significa la
nos veamos reducidos á dar á los protestantes y á accion por la cual un sacerdote que celebra el sanlo
los incredulos lecciones de gramática. V. SANTo. sacrificio de la misa cambia ó convierte el pan y el
No es pues, cierto, que por medio de las consagra - vino en el cuerpo y sangre de Jesucristo. Se compren
ciones los sacerdotes pretenden cambiar la esencia de de desde luego que los heterodoxos, que no creen la
las cosas, comunicarlas una virtud divina, y hacer resencia real de Jesucristo en la Eucaristia, debieron
descender algunas de las cualidades del Altísimo, ¿ de su liturgia el término consagracion.
como el censor inglés les acusa en su escrito; este El sentir comun de los teólogos, con Sto. Tomas,
absurdo no ha podido caber mas que en el cerebro es que la consagracion del pan y del vino se hace en
de nuestros incrédulos. Mas los sacerdotes defienden virtud de estas palabras de Jesucristo: lloc es orpus
que, desde que una cosa cualquiera se consagra al meum, hic est sanguis meus, etc. No se puede probar
culto de Dios, se la debe respetar, no considerándola que antes de Sto, Tonas hubiera ecsistido anterior
en lo sucesivo como una cosa profana, ni empleán mente una opinion diferente en la Iglesia latina.
dola en usos viles y comunes, porque esta señal de Mas se disputó para saber cuál es al presente y
desprecio se juzgaria recaer sobre el mismo Dios. cuál ha sido en todo tiempo el parecer de la Iglesia
Tompoco es cierto que este sea un uso futil y supers griega acerca de las palabras de la consagracion. Pa
ticioso, puesto que Dios lo mandó asi desde el prin ra comprender el estado de la cuestion es indispensa
cipio del mundo. Una ceremonia sensible, una con— ble saber que en la liturgia romana, antes de pro
sagracion pública es necesaria á fin de inspirar á los nunciar las palabras de Jesucristo, el sacerdote dirige
hombres respeto para con todo cuando sirve al culto á Dios una oracion, por la que suplica, se convierta
de Dios, y con objeto de afectar su ánimo con el re el pan y el vino en el cuerpo y sangre de Jesucristo.
cuerdo de la presencia de Dios. En la liturgia griega y en las demas liturgias orien
Tambien es falso que nuestro culto sea lan agra tales, ademas de esta primera oracion, hay tambien
dabe á Dios en un sitio como en otro. Dios habia una segunda que se hace en los mismos términos,
 CON 490 CON
despues de haber pronunciado el sacerdote las pala mo hizo ver el P. Merlin, Tratado de las formas de
bras de Jesucristo. Esta última es la que los griegos los Sacramentos, c. 1,9 y 14.
llaman la invocacion del Espiritu Santo; algúnos la En las liturgias orientales, lo mismo que en la de
rreen esencial para la consegracion. De donde muchos la Iglesia latina, hay una invo acion que precede á
teólogos concluyeron que, segun los griegos, la con— la consagracion; esta última es por tanto perfecta an—
sagracion no se hace por medio de las palabras de tes de la segunda invocacion. pues de otro modo los
Jesucristo; opinion que tacharon de error. Para jus latinos no consagrarian. Por consecuencia los grie—
lificar á los griegos, el P. Lebrun despues del abate ges han cometido un error al suponer la necesidad de
Renaudot, habia compuesto una obra para probar su segunda invocacion; mas no se infiere de aquí que
que la consagracion se hace, no solo por medio de las sea errónea y abusiva.
palabras de Jesucristo, sino ademas por la invocacion Esta segunda invocacion no supone que la consagra
Esplicacion de la misa, t. 5. p. 212 y sig. Bingham, cion y la transubstanciacion no queden hechas, pues—
teologo anglicano, habia sido de la misma opinion. to que no hay términos semejantes en las liturgias gali
Oriq, eccl, l. 15, c. 3, S. 12. El P. Bougeant, jesui cana y mozárabe; sin embargo, nunca creyeron los
ta, defendio contra el P. Lebrun que la consagracion teólogos galicanos ni los españoles que la consagra—
se hace en virtud de las solas palabras de Jesucristo. cion no se hiciese en virtud de las palabras de Jesu
Un tercer teólogo formó en una disertacion impresa cristo. Por tanto se debe enlender esta segunda invo—
en Troyes en 1773, el resumen de la disputa, y con— cacion en el mismo sentido que las oraciones, por cu
cluyó por adoptar la opinion del P. Bougeant. yo medio el obispo pide la gracia del sacramento de
. Observa que antes del siglo XIV, ó antes del con - la confirmacion para los que acaba de confirmar, y
cilio de Florencia, los griegos y los latinos no tuvie como se entienden los exorcismos del baulismo res —
ron enlre sí ninguna disputa acerca de las palabras pecto á un niño que acaba de ser bautizado sin ce
esenciales para la consagracion, aunque los teólogos rern.0IllaS.
latinos estuviesen bien informados de los términos de La invocacion que sigue á la consagracion no obra
ue se servan los griegos en su segunda invocacion. mas efectos que la que la precede; pero sirve para
Por consiguiente los escolásticos que impugnaron á determinar el sentido de las palabras de Jesucristo,
los griegos acerca de este punto han ido mas lejos y hacer comprender que estas palabras no son pura
que sus predecesores. mente históricas sino sacramentales y operativas. En
No se trató de esta disputa en el segundo concilio cuanto á la adoracion de la Eucaristia, que se haga
de Leon el año 1274, ni en los tiempos posteriores, á mas pronto ó mas tarde esto es igual; prueba sola
nº ser entre algunos teólogos. Mas en el concilio de mente que Jesucristo está presente, y que tal es la
Florencia, en 1439, fue viva la disputa sobre este creencia de los que le adoran.
pººlo entre los griegos y los latinos. Se ve por las ac. No se ve la ventaja que Bingham ú otros proles
las del concilio que los griegos, á escepcion de Mar— tantes pueden sacar de la disputa que tuvo lugar entre
cos de Eleso, convinieron en que la consagracion se algunos teólogos católicos y los griegos respecto á las
hace por las palabras de Jesucristo; pero no quisie— palabras de la consagracion. La cuestion entre los
Tºn que esla decision se hiciera constar en el decreto protestantes y nosotros es sobre indagar si los orien
de union, temiendo no apareciese ser una condena— tales han creido siempre, como nosotros, que en vir
cion de su liturgia. tud de estas palabras, el pan y el vino se convierten
En el decreto del papa Eugenio para los arminia realmente en cuerpo y sangre de Jesucristo: asi es,
lºs se dice que la Eucaristía se hace por las palabras que sus liturgias testifican que ellos lo creyeron siem
de Jesucristo de aqui infirieron muchos teólogos que pre asi, y que aun lo creen. Poco importa saber si esta
el concilio de Florencia habia decidido la cuestion. conversion se obra en virtud de estas solas palabras:
Mas entonces ya no se hallaban los griegos en el ccn hoc est corpus meum; hic est sanguis meus, ó por la in
ºlio; ya habían partido. Este decreto decidió sobre vocacion que sigue á estas palabras, ó bien por una y
ºtros varios artículos, acerca de los cuales han con - otra cosa indistintamente. Opinamos unánimemenle
ººr Vado los teólogos la libertad de opiniones, como la que se necesita una ínvocacion antes ó despues para
materia del orden, el ministro de la confirmacion, etc. fijar el sentido de las palabras de Jesucristo, para de
Los mismos latinos han disputado para averiguar notar que el sacerdote no las pronuncia como una,
si Jesucristo despues de la cena, consagró por medio historia, sino como una forma sacramental, eficaz y
de su bendicion ó por estas palabras: hoc est corpus que obra lo que significa. Convenimos tambien por una
meum, Salmeron es testigo de cómo se agitó esta y otra parte en que por medio de una invocacion uni
cuestion en el concilio de Trento: mas este concilio da á las palabras de Jesucristo, la consagraciones
no quiso decidir nada sobre ella. El P. Lebrum opina perfecta, y se obra el efecto. De donde resulla, que
que el Salvador consagró en virtud de su bendicion acerca de este misterio, la creencia de los orientales,
antes de decir:hoc est corpus meum. igualmente que la nuestra, es muy opuesta á la de
Entre los PP. antiguos unos se sirven del término los protestantes.
de invocacion, otros de los términos de bendicion, de De lo que hemos dicho resulta tambien que los an
Eucaristia ó de accion de gracias, ó de oraciones; glicanos ni los demas protestantes no consagran. En
mas casi todos aseguran que la consagracion se hace la liturgia anglicana impresa en Londres en 1606.
por medio de las palabras de Jesucristo. páginas 208, la invocacion que precede á las palabras
Se sabe, por otra parte, que han llamado frecuente de Jesucristo, se limita á pedir á Dios que recibiendo
mente súplica é invocacion á las formas mismas de el pan y el vino pdamos ser hechos participantes de su
los sacramentos, que son puramente indicativas, co cuerpo y de su sangre preciosa. Pero los anglicanos
 CON l.91) CON
están persuadidos de que este pan y este vino no son sagrado de la vida eterna , y el caliz de la salud per
realmente ni el cuerpo ni la sangre de Jesucristo, que petua; sobre los cuales dignaos dirigir una mirada
solo por la é se puede participar del cuerpo y san— propicia y favorable, y aceptarlos como os dignásteis
gre de Jesucristo, recibiendo los simbolos. Ási, las pa aceptar los presentes del justo Abel, el sacrificio de
labras de Jesucristo que pronuncian no tienen mas Abraham y el de Melquisedec, santo sacrificio, hostia
que un sentido histórico y nada producen. inmaculada. Os suplicamos, ó Dios todopoderoso, man
No es esto lo que creen los orientales, puesto que dad que sean colocados en vuestro altar celestial, en
la invocacion que añade espresa lo contrario; ¿por presencia de Vuestra Divina Magestad, por mano de
qué los anglicanos han cambiado esta invocacion, si vuestro santo angel, á fin de que nosotros todos los
tienen la misma creencia que estos cristianos separa que al participar de este altar recibiéremos el santo
dos de la Iglesia romana? Tampoco es la opinion de los y sagrado cuerpo y sangre de vuestro Hijo, seamos
PP. en este punto como la de los anglicanos, pues ilenos de toda bendicion celestial y de toda gracia,
aquellos dicen que las palabras de Jesucristo son ei por el mismo Jesucristo nuestro Señor».
caces, operativas, y dotadas de un poder criador: Ser Bingham arguye aun acerca de esta súplica: si
mo Christi, vivus et efficar opifar, operatorius eff los dones consagrados, dice, son verdaderamente
cientia plenus omnipotencia verbi, etc. El mismo Bin el cuerpo y sangre de Jesucristo, es cosa ridícula
gham , citó muchos pasajes de los PP. que debieron el orar á Dios para que los aceple, el compararlos
haberle abierto los ojos. Vió que S. Justino. Apol. 1, á los sacrificios de los palriarcas, cuyos sacrificios
n. 66, compara las palabras eucarísticas á aquellas no eran mas que figuras: seguramente esta súplica
por las que el Verbo de Dios se hizo carne. Ha leido se compuso antes de la invencion del dogma de la
en S. Juan Crisóstomo, Hom. 1." in prodit. Judas. transubstanciacion. Orig. eccles., lib. 15 , c. 3,
n. 6, Op., tom ¿ 38%: «No es el hombre quien S. 31. Nosotros defendemos por el contrario que
hace que los dones ofrecidos se conviertan en cuerpo y esta oracion supone la transubstanciacion, puesto
sangre de Jesucristo, sino el mismo Jesucristo que fue que nombra los dones eucarísticos el santo y sa
crucificado por nosotros. El sacerdote ejecuta la accion qrado cuerpo y la sangre del Hijo de Dios, á cuyos
esterior, sema, y pronuncia las palabras, mas el po— dones llama una hostia pura y sin mancha, un san—
der y la gracia de Dios es lo que produce el efecto, to sacrificio; espresiones condenadas y desechadas por
hoc est corpus meum, dice, esta palabra transformá los protestantes. El sacerdote no pide simplemente á
los dones ofrecidos, lo mismo que estas otras: creced, Dios reciba estos dones, sino que los acepte, á fin
multiplicaos, poblad la tierra; una vez prenunciadas, de que ó de modo que los que participasen de ellos
dan en todo tiempo á nuestra naturaleza el poder para reciban las mismas bendiciones celestiales que los
reproducirse; asi las palabras de Jesucristo una vez patriarcas: no se compara, pues, este sacrificio á los
dichas, obran desde este momento hasta sn última suyos, en cuanto al valor, sino relativamente á las
venida, en cada altar de nuestras iglesias, un sacrificio gracias concedidas á los que los ofrecieron.
perfecto.» Esto solo significa, dice Bingham, que Je Mas tal ha sido siempre el método de los protes
sucristo al pronunciar una vez estas palabras, dió á tantes cuando en la Escritura, ó en los antiguos
los hombres el poder de hacer su cuerpo simbólico, es monumentos hay algunas espresiones que les inco
decir, la figura de su cuerpo. Mas para hacer una modan , las truncan, las dan un sentido vago, y las
figura, una imágen, una representacion, ¿se necesita miran como unas maneras de hablar abusivas; si se
el poder de Jesucristo, la potestad y la gracia de Dios? halla en parte alguna una sola palabra que parezca.
Segun S. Juan Crisóstomo, el mismo Jesucristo es favorecerles, la apuran, la toman á la letra y hasta el
quien, en virtud de la palabra pronunciada por el sa. último rigor.
cerdote, transforma los dones ofrecidos, produce su
cuerpo y su sangre. En una simple figura, ¿dónde es Consagracio an. (Derecho canónico). Llá
tá la iransformacion? El pan y el vino por sí mismos, mase de esta manera la ceremonia empleada para ha
son un alimento corporal; son pues por sí mismos la cer una cosa sagrada. Para ¿ lo que es la
consagracion, conviene saber que se distinguen tres
figura de un nutrimento espiritual, y por tanto del clases
cuerpo y de la sangre de Jesucristo; no es necesario de aceites santos.
un poder divino para darles esta significacion. 1." El de oliva mezclado con bálsamo que se lla
Asies que los modernos escritores protestantes, quie. ma crisma.
nes se esplican con mas sinceridad que sus anteceso 2." El de los catecúmenos, que no es mas que el
res; no hacen gran caso ni de los pasajes de los PP., de oliva, v se llama oleo santo.
ni de las liturgias orientales; han vistó que la forma 3." El de los enfermos, que comunmente es de
de la consagracion es bastante clara en los citados nominado de la misma manera; pero con mas propie
testos, y que el sentido está ademas fijado por las se— dad llámase en los libros eclesiásticos oleo de los en
ñales de adoracion tributadas á la eucaristía. Véase fermos. -

la Perpetuidad de la fé, tom , lib. 1.º, cap. 9, tom. 5, El crisma, cuyo sentido místico esplica el cap. 1,
Prefacio. Tanto empeño como manifestaron los anti de sacra Unctione, cap. Cum renisset, S. A d erhiben
guos controversistas protestantes para alcanzar la dum , se usa en la uñcion de los bautizados, de los
aprobacion de los orientales, otro tanto la desprecian confirmados, de los obispos, de las iglesias, allares,
los modernos. cálices, patenas y pilas bautismales.
En la misa romana despues de la consagracion, el El aceite de los catecúmenos sirve para ungir á los
sacerdote dice á Dios: Ofrecemos á Vuestra Magestad bautizados en ciertas partes del cuerpo, las iglesias
Suprema, la hostia pura, santa, sin mancha; el pan y altares antes de la uncion del santo crisma, las
 CON 492) CON

manos del sacerdote cuando se ordena, y los brazos gis dignum attrahit ad se minus dignum. (C. Quo
y espalda de los reyes que se consagran. in dubiis de Consecrat. Ecclesiae).
El de los enfermos se aplica sobre aquellos á quie— Cuando un obispo está ausente de su diócesis, ó se
nes se administrael sacramento de la Estrema-Uncion. halla vacante la silla, viene otro á consagrar los
No puede el obispo consagrar el santo crisma sino oleos. (Glos., rerb., Spiritual., in c. Si episcopus, de
el jueves de la semana santa, y debe renovarlo to Supl Negl. praes). En caso de necesidad, ya por—
dos los años; y este deber es de precepto. C. Si quis, que no haya obispo que consagre los oleos, ó por
c. Omni tempore; J. G, dist. , de Consecrat). otra cosa, pueden servir los sobrantes del año an
El crisma que debe servir de materia al sacramen terior.
lo de la confirmacion, no puede ser consagrado mas No hay esencion para el obispo en las cosas que
que por el obispo mismo , non autem á simplici sa dependen de la polestad de órden; asi es que les re
cerdote. Por esta razon al comeler los papas la admi gulares mas privilegiados deben recurrir al obispo
nistracion de dicho sacramento á los sacerdotes, les para la consagracion de los oleos, la de iglesias, pa
imponen siempre la obligacion de servirse del santo ra las o denaciones, etc. (C. Veniens, 16 cers. Chris
crisma consagrado por los obispos. Nemo est, dice ma, de Prascript).
Benedicto XIV, qui dubitet chrismatis benedictionem La confeccion y distribucion del crisma y de los
commemoratam semper fuisse inter propria et praeci— santos oleos deben hacerse gratuilamente, bajo pena
pua episcopalis ordinis munera. de simonia. C.. Ea quae, de Sim).
Algunos autores han dicho que el papa podia co Aunque el bautismo y la confirmacion puedan ser
meter á un sacerdote la confeccion del santo crisma administrados solemnemente en una iglesia entredi
para que sirviese de materia al sacramento de la cha, segun la disposicion del cap. Quoniam de sent.
confirmacion, alegando por razon que la forma de ercom. in 6.º, no puede consagrarse en ella el santo
esta consagracion quedó á disposicion de la Iglesia, crisma sino á puerta cerrada : Januis clausis jurta
y que solo por los cánones han recibido los obispos moderationem (C. Alma mater, vers. Adjecimus, de
la facultad esclusiva de hacerla. Las palabras rele sent. ercom., in 6.”). Juzga Barhosa que la confeccion
ridas de Benedicto XIV y la práctica general de la del crisma puede hacerse tambien públicamente en
Iglesia prueban cuán estraña es esta opinion. una iglesia entredicha (de offic. et potest. episc, alleg.
Cuando un obispo tiene á su cargo dos diócesis, 51, núm. 25). - -

debe hacer alternativamente en una y en otra la con— Los sacerdótes no pueden hacer ó dar las bendicio
sagracion del santo crisma. (C. Te referente, de ce nes in quibus adhibetur sacra unctio, es decir, la un
tebr. miss., et ibi doct). cion de los sagrados oleos; entiéndese esto sin la de
Empléase, como hemos dicho, el oleo de los cate— legacion del obispo; porque en la bendicion de las
cúmenos en ungir el pecho y las espaldas de los hau campanas puede el sacerdote hacer la uncion del cris
tizados, las manos de los clérigos elevados al sacer— ma. (Dictionaire de droit canon).
docio, las iglesias y allares antes de la consagracion 3. CONSAGRACION DE LOS OBISPOS. (Dere
con el crisma, y en fin á los príncipes y reyes cris— cho canónico) Es una ceremonia eclesiástica, cuyo
tianos. Por derecho eclesiástico debe ungirse á todos objeto es dedicar á Dios de una manera enteramente
los reyes cristianos; pero esta uncion es diferente de particular el que ha sido nombrado obispo, y darle el
la que se hace á los obispos, por cuanto esta se hace carácter, y orden anejo, al obispado. Es propia
con el santo crisma, in capite et in manibus, en vez mente la recepcion del obispo en su Iglesia. Lláma
que la otra solo se hace in brachio, in modum crucis, sela consagracion, porque el obispo se hace persona
y con el oleo de los catecúmenos, ut ostendatur, sagrada por la uncion del santo crisma.
dice el papa Inocencio Ill, in cap. 1 de sacra Unct., Una vez confirmado y puesto en posesion puede
quanta sit diferentia inter auctoritatem pontificis et hacer todo lo que depende de la potestad de jurisdic
principas potestatem. cion. Pero no podria emprender sea lo que fuere que
El oleo de los enfermos es la materia rermota del
dependa del ministerio del orden, ni gozar de la ple
sacramento de la Estrema-Uncion. Solo el obispo nitud del sacerdocio que confiere el derecho de orde
puede consagrarlo: Ab episcopo tantum oleum in fir nar y de deponer á los clérigos, de bendecir las
morum benedicendum. Dicen los teólogos que el sa imágenes, de consagrar las iglesias y los altares has
cramento de la Estrema-Uncion no seria válido, si la que habiera sido consagrado. (C. transmissam de
no se lisase en él precisamente el oleo de los obispos; Elect). El obispo cuya eleccion ó nombramiento haya
que el obispo debe consagrarlo todos los años. (Er sido debidamente confirmado por la institucion canó
cap. Literis, dist. 3, de Consecrat). Dice Bonacina nica, debe hacerse consagrar dentro de tres meses
que el papa puede cometer á un sacerdote la confec— á contar desde el dia de la confirmación, bajo la pena
cion del oleo de los enfermos. (De sacrum. dispens. de perder los frutos del obispado, y el obispado mis
7, q. 1. Cunct. 2, n. 6); y habria diferencia entre mo, si deja pasar otros tres sin cumplir este deber.
este oleo y el santo crisma acerca de esto? Bonacina Tal es la disposicion del canon, Quoniam , dist. 75,
cree que no, y añade que tambien puede el papa co sacado del concilio de Calcedonia, y del canon 1, dist..
ineter á un sacerdote la confeccion del crisma. Ya he 100, renovado por el concillo de Trento, ses. XXII,
imos hablado acerca de esto. cap. 2, de Reform. en estos términos. Los que hu
Dicen tambien los teólogos que puede un sacerdote bieren sido propuestos para la direccion de las igle.
ó un cura, mezclar aceite no consagrado al que ya lo sias catedrales ó superiores bajo cualquier nombre ó
está cuando este no le parece suficiente: Modo quod título gue sea, aun cuando fuesen cardenales de la
additur, sit minoris quantitatis consecrato; nam ma— santa Iglesia romana, sino se consagran en el térmi
 (CON. 93 (()N
ro de tres meses, estarán obligados á restituir los fru ejemplo lo que enliende de las divinas Escrituras; si
tos que hubieren percibido. Y si son negligentes por quiere observar y enseñar las tradicciones de los
espacio de estos tres meses, estarán privados de de PP. y los decretos de la Santa Sede; si quiere obeder
recho aun de sus iglesias. Si la ceremonia de su con cer al papa conforme á los cánones; si quiere alejar
sagracion no se hace en Roma, se verificará en la igle sus costumbres de todo mal, y con el ausílio de Dios,
sia misma á que hubieren sido promocidos, ó en la convertirlas en bien, practicar y enseñar la castidad.
misma provincia , si cómodamente puede hacerse. sobriedad, humildad y la paciencia; si quiere ser
La forma de la consagracion está espresa en el alable con los pobres y tener piedad de ellos, estar
Pontifical; y tambien la forma de la consagracion que dedicado al servicio de Dios, y alejado de todo nego
se hace al tiempo de las elecciones. Fleury la ha re— cio temporal, y de todo bien sórdido. A continuacion
ferido en su institucion al derecho eclesiástico. Tras le preginta acerca de la fé de la Trinidad, de la En
cribiremos aqui, con las adiciones necesarias, la úl— carnacion, del Espíritu Santo, de la Iglesia; en una
tima, segun el autor citado, el cual en pocas palabras palabra, sobre todo el contenido del símbolo, indican
ha espresado todo el sentido de dicha forma. do las principales heregias con los términos mas pre
La consagracion debe hacerse un domingo (C. Qui cisos que la Iglesia ha empleado para condenarlas.
in aliquo, dist. 51; c. ordinationes; c. quod die domini (c. qui episcopus, dist. 23).
co, dist. 75), en la iglesia propia del electo, segun la Concluido el ecsamen, el consagrante principia la
prescripcion del concilio de Trento. Sin embargo, hace
misa: despues de la epístola y el gradual, vuelve a
mucho tiempo que en Francia se consagraban los obis su silla, y estando el elegido sentado delante de él, le
pos ordinariamente en París. Mas algunos años des instruye en sus obligaciones, diciéndole: un obispo
pues, los fieles han visto con gozo á los que debian debe juzgar, interpretar, consagrar, ordenar, ofrecér,
ser sus padres en la fé recibir la consagracion episco bautizar y confirmar. Despues, estando prosternado
al en las mismas iglesias á que estaban promovidos. el elegido, y los obispos de rodillas, se dicen las leta
l sobrescrito de las bulas determina hoy el lugar nias, y el consagrante toma el libro de los Evangelios,
donde debe hacerse la consagracion. º pone enteramente abierto sobre el cuello y espal
as del elegido. Esta ceremonia era mas fácil en tiem
El consagrante debe estar asistido al menos de dos
obispos. Debe ser el metropolitano, quien puede con po que los libros eran unos rollos, porque estendido
sentir siempre que otro haga la consagracion (c. Epis asi el Evangelio pendia de los lados como una estola.
copi, dist. 2'; c. ordinationes, dist6; c. Non debet, El consagrante pone en seguida sus manos sobre la
dist. 65), aunque todos juntos cooperen á la consagra cabeza del elegido con los obispos asistentes, dicién
cion, no hay alli mas que uno que desempeñe esla un. dole: Accipe Spiritum Sanctum. Esta imposicion de las
cion. El papa puede cometerla consagracion de un obis manos está marcada en la Escritura, como la cere—
poáunosolo. Quia forma binon accipitus pro substan monia mas esencial á la ordenacion, y la imposicion
tia rei, sed tantum pro ritu. Pero no lo hace sino en del libro es tambien muy antigua para denolar sensi
casos estraordinarios. El consagrante y el elegido de blemente la obligacion de llevar el yugo del señor,
ben ayunar la víspera (Pontíf. ron... Sobre lo que y de predicar el Evangelio. (I. Tin... V; y .22; Const.
se ha preguntado, si el elegido, habiéndose ordenado apost., lib. VIII,
de sacerdote el sábado puede ser consagrado el do El consagrante dice un prefacio, en el que suplica á
mingo en la mañana. Affirmant Glos. 1. in fin, c. Dios déal elegido todas las virtudes, de las cuales eran
quod á patribus, dist. 75; Innoc., in c. Litteras, símbolos misteriosos los ornamentos del gran sacerdo
vers. Nec valet, de Tremp. ordin.; Hest. Abb., ibid. le de la antigua ley; y mientras que se le canta el him
Estando el consagrante sentado, y delante delallar, no del Espíritu Santo, le unge la cabeza, con el santo
el mas antiguo de los obispos asistentes le presenta el Crisma; despues acaba la súplica que ha comenzado,
elegido diciendo: La Iglesia católica pide que eleceis pidiendo para él la abundancia de la gracia y de la
este sacerdote al cargo del obispado. El consagrante no virtud que está espresada por esta uncion. Se canta
pregunta si es digno, como se hacia en tiempo de las el salmo 132 que habla de la uncion de Aaren, y el
elecciones, sino solamente si hay mandato apostó consagrante unta, las manos del elegido con el santo
lico, es decir, la bula principal ¿ P novisioNEs), Crisma; despues bendice el báculo pastoral que le dá
que responda del mérito del elegido , y la hace leer. en señal de su jurisdicion, advirtiéndole juzgue sin
En seguida el elegido presta juramento de fidelidad á ira, y mezcle la dulzura con la severidad. Bendice el
la Sanla Sede, segun una fórmula de la cual se halla anillo y se le pone en el dedo en señal de su fé, ex
un ejemplo desde tiempo de san Gregorio VII. Des— hortándole á guardar la Iglesia sin mancha, como la
ues se han añadido muchas cláusulas , entre otras esposa de Dios. En fin, le quita el libro de los Evan
a de ir á Roma cada cuatro años á dar cuenta de su ¿ de encima de las espaldas y se le pone entre
conducta, ó enviar un diputado. Concil. Rom. año as manos, diciendo: Tomad el Evangelio é id á predi
de 1079). car al pueblo que os está encomendado : pues Dios cs
Esta práctica no se observaba en Francia; pero se bastante poderoso para aumentaros su gracia.
ven hoy ya muchos ejemplos. Aqui se continúa la misa, se lee el Evangelio, y
Entonces el consagrante comienza á ecsaminar al antigüamente el nuevo obispo predicaba para entrar
elegido sobre su fé y costumbres, es decir, sobre sus en el ejercicio de sus funciones. Al ofertorio, ofrece
intenciones para lo sucesivo: pues se supone que se pan y vino segun el antiguo uso: despues se junta al
está seguro de lo pasado. Le pregunta, pies, si quiere consagrante y acaba con él, la misa, donde comulga
someter su razon al sentido de la Sagrada Escritura, bajo las dos especies, y de pie. Acabada la misa, el
si quiere enseñar á su puehlo con sus palabras y consagrante bendice la mitra y los guantes, denotan—
TOMO I, 68
 (CON 9. CON
do sus significaciones misteriosas: despues entroniza eterna; Jesus le responde: observa los manda
al consagrante en su silla. Esta parte de la ceremonia mientos. Los he observado desde mi juventud, res
es llamada entronizacion, porque es la instalacion en mondió este prosélito; qué ora cosa me resta que
la cátedra episcopal que está hecha en forma de trono, Si quieres ser periecio, replicó el Salva
eslando elevada y cubierta con un dosel, como los lro dor, marcha , , vende todo cuanto posees, y entre
nos de los príncipes. En seguida se canta el Te-Deum, ga el producto á los pobres, y tendrás un tesoro en
y entrelanto los obispos asistentes pasean al consa el cielo; despues ven y sigueme». Mat., c. 19,
rado por toda la iglesia para mostrarle al pueblo. En y. 16; Marc., c. 10, y 17; Luc., c. 18, y . 18.
n, dá la bendicion solemne: Consecratus surgens cum Segun estas palabras, lo que Jesucristo le propu
mitra el báculo in medio altaris dat solemnem benedic so no era necesario para alcanzar la vida eterna, sino
tionem, qua data, genuflearus versus consecratorem di para practicar la perfeccion y ser admitido en el
cit cantando: A d multos annos. ministerio apostólico.
El obispo no puede, el mismo dia de su consagra— Muchos censores del Evangelio dijeron que la dis—
cion episcopal, conferir órdenes, ni llenar las funcio— tincion entre los preceptos y los consejos es una su—
nes que pertenecen al carácter episcopal, ni aun ce— tileza invenlada por los teólogos para paliar lo ab—
lebrando la misa y despues de la consagracion. (C. surdo de la morat cristiana. Es claro que semejan
quod sicut, 29, 55, Super de Elect). le acusacion eslá muy mal fundada. La leyó el pre
Son consagrados todos los que tienen la dignidad cepto se limita á prohibir lo que es un crímen , y
episcopal, aun el soberano ponlífice, que, segun cos mandar lo que es un deber: los consejos ó mácsimas
tumbre, es consagrado por el cardenal—obispo de deben avanzar mas, para seguridad de la misma
Ostia; el pontífice puede, sin embargo, recibirla del ley; todo el que quiera atenerse estrictamente á lo
obispo á quien quiera honrar con su eleccion. Los se le manda, no tardará mucho en infrinjir
abades, en lugar de consagracion, reciben la ben a ley.
dicion. Otros se escandalizaron del término consejos; no es
El obispo consagrado fuera de su Iglesia nada de— conveniente á l)ios, dicen, aconsejar, sino mandar.
be interesarle mas, despues de esta ceremonia, que Esta observacion no es mas esacla que la preceden
volver á su diócesis, y si viene de Roma, debe traer te. Dios, legislador sabio y bueno, no mide la es—
indulgencias para los que oigan su primera misa. El lension de sus ley es por la de su soberano dominio,
pueblo debe recibir á su nuevo pastor con alegria y sino por la debilidad del hombre; despues de haber
dignidad; Episcopi pro Cristo legatione funguntur in mandado en rigor, bajo la alternativa de una recom
terris (C. Omnes qui, 7, q. l; c. Accusatis quoque, pensa ó de una pena eterna, lo que es absolutamen
2. q. 7; c. in noro, dist. 21). ie necesario para el buen orden del universo y con
Los ceremoniales eslablecen que en esla entrada el servacion de la sociedad, pudo manifestar al hom
clero y los nobles de la ciudad irán á recibir al nuevo bre un grado mas alto de virtud, promelerle gracias
obispo á la puerta de las murallas; que de aqui el pre para que confiase en ellas, y proponerle una recom
lado, cubierto con su mitra y montado en un caballo pensa mayor. Esto fue lo que cabalmente hizo Jesu
blanco, enjaezado y convenientemente adornado, irá, cristo.
bajo un palio que tendrá el primer magistrado de la En general, no se puede dar al hombre una idea
ciudad, hasta su iglesia, de la cual es esposo Jure demasiado elevada de la perfeccion á que puede lle
divino indissolubile. gar con el ausilio de la gracia divina. Desde el mo
La consagracion de un arzobispo es poco masómenos mento en que el hombre se penetra de la nobleza de
que la de un obispo; hay estas diferencias, que en la su origen, de la grandeza de su deslino, de lo que
consagracion del arzobispo, ademas de los tres obispos perdió y de los medios que tiene para repararlo, del
sufragáneosque dehen necesariamente procederá ella,
- • • - la, premio que Dios reserva á la virtud, no hay nada de
los otros obispos de la provincia deben tambien asis que no sea capaz; el ejemplo de los saños es la
tir, ó al menos escribir sus cartas de adhesion, lo mis prueba de esta virtud.
Ill.0 el primado. (C. quia, dist. 6; c. 1, dist. 66). Por lo demas, la prevencion de los incrédulos con
El arzobispo aunque consagrado y puesto en pose tra los consejos evangélicos les viene de los prolesan
sion no puede ejercer clase alguna de funciones, sive les, por cuya razon estos últimos no han hablado de
ordinis, sive jurisdictionis, si no la recibido el palio. ellos de un modo mas sensato. Dijeron que Jesucris
Los obispos y arzobispos de Francia deben, des to habia prescrito á todos sus discípulos una misma
pues ó antes de su consagracion, ir á prestar al rey y única regla de vida y de costumbres; pero que mu
el juramento de fidelidad prescrito por el artículo 6 del chos cristianos, bien fuese por gusto de úna vida aus
concordato de 1801; están obligados á hacerlo antes tera, ó ya por imilar á ciertos filósofos, pretendie
de entrar en sus funciones. (Dictionnaire de Droit ron que el Salvador habia establecido una doble re
canon). gla de santidad y de virtud, la una ordinaria y co
mun, y la otra estraordinaria y mas sublime. La pri
Comasa angua in ladad ó pare antesco. jéase mera, para las personas que se hablan empeñado en
Ml ATRIMoNio. vivir en el mundo; la segunda, para las que vivien
do en la soledad, no aspiraban mas que á la felici
Consejos Evangélicos, ó Máximas dad del cielo; que distinguieron Or ConSecuenCla en
de perfeccion. Jesucristo los distingue cla la moral cristiana los preceptos obligatorios para to
ramente de los preceptos. «Un hombre joven le dos los hombres, y los consejos que se referian á los
pregunta qué debia hacer para alcanzar la vida cristianos mas perfectos. Este error, dice Moshein º
 CON 95 CON
nació mas bien de imprudencia que de mala volun desprecio de las prácticas religiosas; asi que no han
tad; pero no dejó de producir por esta razon otros convertido ni á paganos ni á bárbaros, pero en su
errores en todos los siglos de la Iglesia, y de multi defecto han pervertido á varios cristianos.
plicar los males bajo los cuales el Evangelio ha ge
mido frecuentemente. De aqui, segun él, nacieron las Conservador, Conservacioza. la reve
austeridades y la vida singular de los ascetas, de los lacion se reune á la luz natural para enseñarnos
solitarios, de los monges, etc. Hist. ecles. del si ue Dios conserva á las criaturas á las cuales ha da
glo II. 2.º parte, c. 3, S. 12. -
do el ser, y mantiene el orden físico del mundo; el
Mas preguntamos á los protestantes si Jesucristo autor del libro de la Sabiduria dice al Señor: «¿Có—
impuso un precepto á todos los cristianos cuando di mo seria posible que subsistiera cosa alguna, sivos
jo: «Cualquiera de vosotros que no renuncie de todo no lo quisierais, ó cómo se habia de conservar sin
cuanto posee, no puede ser midiscípulo». Luc., c. 1, vuestra orden?» Sap., c. 11, y. 26. Dios conserva
33. «Bienaventurados los pobres, los que tienen el orden moral entre las criaturas inteligentes en vir
ambre, los que lloran; dad limosna á todo el que os tud del instinto moral que les ha dado por medio de
la pida, y si os quita lo que os pertenece, no lo re— la conciencia que les intima su ley y las hace temer
claneis.» Cap. 6, y. 20 y 30. «Si alguno quisiere el castigo del crímen. En esta doble atencion consiste
venir en pos de mí, que renuncie á sí mismo, lle— la providencia.
ve su cruz y sígame». Cap. 9, y. 23. «IIay eunucos Mas nada nos manifiesta mejor la accion contínua
que renunciaron al matrimonio por el reino de los de Dios en la marcha de la naturaleza, que el poder en
cielos; el que pueda ¿ que lo compren— cuya yirtud suspende las leyes de esta cuando le pla
da». Mat., c. 19, y. 12. Los comentadores, aun pro ce. El mundo, sumergido en las aguas del diluvio, el
testantes, se han visto obligados á reconocer en este fuego del cielo lanzado sobre Sodoma, los mares di
pasaje un consejo y no un precepto. Véase la SINop yididos para abrir paso á los hebreos y sumergir, á
sis acerca de este punto. los egipcios, etc.: aqui los acontecimientos por los
S. Pablo dijo, l. Cor., c. 7, y 10 : «Una viuda cuales Dios ha convencído á los hombres de que es
será mas dichosa si permanece en este estado, se— el único Señor, el único conservador del universo.
gun mi consejo; pues creo estar inspirado por el es— Fn aquellos tiempos se necesitaban milagros, porque
píritu de Dios». Exhortando á los Corintios á que el comun de los hombres no se hallaba en estado de
diesen limosnas, les dice: «No os propongo un man discurrir acerca del orden físico del mundo, ni de
damiento.... sino que os doy un consejo, porque esto observar en él una mano atenla y bienhechora. De
os es útil». II. Cor., c. 8, y.8 y 10. A los Gála este modo, Dios previno con anticipacion á los hom
tas, c. 5, y. 2: «Los que se han dedicado á servir bres, aun ignorantes y groseros, contra los falsos sis
á Jesucristo han crucificado su carne con sus vicios temas de los filósofos que han enseñado, unos, que
¿ corrupciones». Si los cristianos del siglo II se Dios es el alma del mundo, y que el mundo es eter
an equivocado al distinguir los consejos de los pre no; otros que Dios, despues de haberle construido,
ceptos, Jesucristo y S. Pablo fueron quienes los in dejó el cuidado de él á ciertas inteligencias subalter
dujeron al error. Para apreciar y practicar austerida nas. El dogma de un solo Dios criador y conserva
des, mortificaciones, abstinencias, y renunciar á las dor es la creencia primitiva; si los pueblos hubieran
comodidades de la vida , no tuvieron necesidad de sido fieles en guardarla, no habrian sido engañados
consultar el ejemplo de los filósofos, el gusto de los ó estraviados ni por el politeismo, ni por la idola
orientales, ni las costumbres de los esenios ó de los tria, ni por los prestigios de la filosofía. Pero una
terapeutas; les fue suficiente leer el Evangelio. vez desconocida ésta grande verdad, ha sido nece
Cuanto á los pretendidos males que resultan de la saria una nueva revelacion para restablecer la creen
observancia de los consejos evangélicos, ¿son por ven - cia, y tal era el objeto de las lecciones que
tura tan terribles? Nuestros antiguos apologistas nos dió Dios á los hebreos por Moisés. V. RevelacioN.
demuestran que la mortificacion, la castidad, el
desinterés de los primeros cristianos, como igual Consolacion. Ceremonia de los maniqueos al
mente su dulzura, su caridad y su paciencia, causa— bigenses, por la cual pretendian que se les borraban
ron admiracion á los paganos y produjeron una in todas sus fallas; la conferian en el artículo de la
finidad de conversiones. En los siglos siguientes, las muerte, la habian sustituido á la penitencia y al viá
mismas virtudes, practicadas por los solitarios, suavi tico. Consistia en imponer las manos, elevarlas so
zaron en gran manera la ferocidad de los bárbaros: bre la cabeza del penitente, y en tener el libro de los
si los misioneros que convirtieron á los pueblos del Evangelios rezando siete pater noster con el princi—
Norte no hubiesen practicado los consejos evangélicos, pio del Evangelio de S. Juan. Un sacerdote era
no hubieran podido atraer quizá un solo prosélito. Hé quien administraba esta ceremonia; era necesario
aqui las desventuras á juicio de los protestantes para su eficacia que se hallase , limpio de pecado
hicieron llorar á la Iglesia en todos los siglos, y que mortal. Se dice que cuando se les habia administra
los incrédulos deploran lo mismo que ellos. Afortu do la consolacion, serian capaces de morir en medio
nadamente los reformadores han llegado en el si de las llamas sin quejarse, como tambien que huie
glo XVI á reparar todos estos males; han formado ran dado todo cuanto poseian por sufrir tales tormen
sectarios, no por medio de ejemplos de virtud, sino tos. Ejemplo patente de lo que pueden el entsuiasmo
con declamaciones y argumentos, han fundado una y la s persticion cuando se apoderan del alma.
nueva religion, la cual no tiene por base la perfec Consortc. Sociedad ó cofradía de la Orden
cion de las costumbres, sino la independencia y el Tercera de S. Francisco, establecida en Milan, y
e
 - CON 96 CON -

compuesta de hombres y mujeres, para consuelo ron despues de la muerte de Constantino, y despues
de los pobres. Se la confió la distribucion de las li— de la estincion de su familia; ningun interés, pues,
mosnas; se condujo con tanta fidelidad, que se re— tenian en disfrazar la verdad.
conoció bien pronto la alta que se habia cometido, Es falso que Constantino haya hecho asesinar á
rivándola de esta funcion delicada. Fué necesaria Licinio á pesar de la fé de los tratados. Tres veces se
a mediacion del papa Sisto IV para obligarla á que habia armado contra él Licinio, y otras lanlas ha—
volviera á encargarse de la distribucion referida: bia sido vencido en balalla ordenada, y habia sido
prueba de que no sacaba mas ventajas en la práctica perdonado. Despues de haber renunciadosolemnemen
de este encargo que trabajos meritorios para la otra te al imperio, reducido á simple particular, aun cons
vida; ventaja que la piedad sólida fácilmente piraba; violó, por consiguiente, los tratados, y por
procurarse. El debate mas escandaloso que pudiera tanto no fue condenado á muerte conlra la fé de los
verificarse entre cristianos, seria el que tuviera por tratados: la muerte de un vasallo rebelde, decretada
objeto la administracion de los bienes de los pobres; por un emperador absoluto, despues de concederle el
mas los que tienen valor para encargarse de esta fun— perdon tres veces, jamas fue un asesinato,
cion delicada, son acusados frecuentemente de ser Constantino no es el autor del homicidio de Lici—
muy poco á propósito para ello. niano; ningun escritor ha osado acusarle de tal cri—
men, ni tampoco ecsiste prueba alguna que justifique
Constantino. Nada deberiamos tener que semejante acusacion. -

decir acerca de este emperador; mas los crílicos mo— Maximiano, su suegro, habia alentado contra
dernos se han empeñado en de migrarle, á fin de ha— su vida, siendo ademas un monstruo cubierto de crí
cer sospechosa su conversion al cristianismo, y desa— menes: despues de haber renunciado al imperio,
credilar á los escritores eclesiásticos que elogiaron sus queria apoderarse nuevamente de él y quitársele á
yirtudes. Basnage les ha suministrado los materia— su yerno, y fué obligado á degollarse á sí mismo. El
les. Historia de la Hglesia, tom. 2, p. 1077. Mos deshacerse de un competidor injusto, ó mas bien, de
heim no ha sido tampoco mas justo, Hist. christianaº, un asesino, para prevenir nuevas guerras civiles, ¿es,
sac. ... p. 952. Un teólogo i. Saber á qué atenerse por ventura un crímen?
y especto al carácter de este príncipe. Confesamos que el homicidio de Crispo fue injusto.
I. Se le imputan los homicidios de Licinio, su cu Su suegra, Fausla, le acusó de haber atentado contra
ñado , asesinado á pesar de la fé de los tratados; de su pudor: Constantino, demasiado crédulo, se equi
Liciniano, su sobrino, asesinado á la edad de doce vocó por no ecsaminar con el mayor esmero este pre
dños; de Maximiano, su suegro, degollado por su ór tendido crimen; pero cuando se persuadio de la
den en Marsella; de su propio hijo, Crispo, príncipe inocencia de su hijó, Constantino castigó la calumnia
de grande esperanza, injustamente condenado á de Pansta; defendemos que hizo un acto de justicia.
mlerte, despues de haberle vislo ganar varias ba— Ningun escritor cristiano ha tratado de justificar ni
tallas; de la emperatriz Fausta, su esposa, ahogada disculpar el homicidio de Crispo,
en un baño. Se insiste acerca de la crueldad con En cuanto á la crueldad que ejerció contra los ge—
hizo devorar por bestias feroces, en los juegos fes de los francos y contra los prisioneros, es pre
el circo, á todos los gefes de los francos con los ciso tener presente que hacia mucho tiempo acostum
risioneros que habia hecho en una espedicion so— braban los romanos á hacer contra los bárbaros la
e el Rhin; se añade que todos estos crímenes ecse guerra sin cuartel; que despues de la victoria alcan
crables deshonrarán para siempre su memoria. zada sobre Maxencio, Constantino rescató, á fuerza
Si todos estos homicidios fueran ciertos, nos ad.— de dinero, la vida de los prisioneros, que colocó en
mirariamos de que Juliano, el cual no guarda á la Ilvria v en la Tracia trescientes mil sármatas ar—
Constantino consideracion alguna en la Sátira de rojados de su pais por otros bárbaros; por consi
los Césares, nada baya dicho de estos asesinatos, guiente no era un monstruo sedieno de sangre hu—
mientras que trató de monstruos á los dos competi— mana. Sus predecesores habian, por espacio de tres
dores de Constantino; que Zosimo, historiador paga— cientos años, hecho devorar por las bestias en el
no, muy indispuesto contra él, no le hubiera impu— circo á los cristianos, los cuales no eran ni francos,
lado estos crímenes; que Lihiano y Praragoras, otros ni sármalas, sino romanos; y sin embargo, los cen
paganos celosos, se hayan al revido á hacer un elo— sores de Constantino lo han tenido por bueno.
gio completo de las virtudes de Constantino, cuando II. Sus acusadores trataron de hacer sospecho
ya no ecsistia, y cuando se podia deshonrar impune sos los motivos y las causas de su conversion al cris
inente su memoria. Mas los paganos contemporá— tianismo; unos han dicho, sobre la fé de Zosimo, his—
neos fueron menos injustos que los filósofos del si toriador pagano muy prevenido contra este principe,
glo XV ll; los primeros le han adorado como á un que se hizo cristiano porque los pontífices del pa
bios despues de su muerte, los segundos quieren ganismo le aseguraron qué su religion carecia de es—
hacer que se le deleste como á un criminal. piaciones bastante poderosas para purgar los críme
Para iuzgar á Constantino con imparcialidad, es nes que habia cometido. Este absurdo está suficien
necesario, consultar á Tillemont ; no ha suprimido temente refutado por los elogios que le proligaron
ninguna de las acusaciones dirigidas contra esie prín otros autores paganos, y por el culto idólatra que le
cipe: á las cuales opone, no el testimonio de autores tribularon los paganos despues de su muerte. Eutro
cristianos, sino el de historiadores paganos, Aure po, lib. 10. Otros emperadores, mas culpables que
lio, Victor, Eutropio, Amanio Marcelino, de Liba él, no creyeron tener necesidad de espiacion, y se
nio y de Juliano: la mayor parte de ellos escribie sabe ademas qne los pontífices del paganismo no eran
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censores muy rígidos respectos á, los emperadores. ron triunfantes, y no se omitió el colocar un largo es
Otros dicen que Constantino se hizo cristiano por tracto de esta disertacion en la antigua enciclopedia,
política, porque vió que los cristianos eran ya bajo la palabra VisioN DE CoNsTANTINo.
numerosos y fuertes; que podia contar con su fide En 1774, M. el abale Duvoisin, les opuso una di-.
lidad, que su religion era mas capaz que el paga— sertacion mas es acta y mas sólida; refirió las pruebas
nismo para contener á los pueblos en la obediencia, y testimonios que acabamos de indicar, haciendo sen
Sea por un momento. Resulta ya de aqui que Cons lir la fuerza de sus argumentos y respondiendo á to
tantino fué mas sábio y mejor político que sus pre das las objeciones: puede consultarse esta obra. Se
decesores; que hizo al cristianismo mas justicia que verá en ella del modo mas patente la temeridad con
no la que le tributan los incrédulos, y que por su que los prolestantes trabajaron para poner en duda
advenimiento al imperio no se engañó, pues que su los hechos de la Historia eclesiástica, que aparecian
reinado fué pacífico y dichoso. Mas los motivos de plenamente justificados, y las armas que dieron á los
política en nada derogan á las pruebas que este prín incrédulos para impugnar todos los hechos favorables
cipe, pudo adquirir por otra parte acerca de la di al cristianismo.
vinidad del cristianismo. Limitémonos á observar que se sospecha sin razon
El mismo Constantino refirió que antes de presen alguna de la probidad de Constantino. 1.° ¿Se ha
tar la batalla á su competidor Maxencio habia visto probado que Dios no pudo ó no debió hacer un mila
despues del medio dia en el cielo y sobre el sol una gro para convertir á este emperador y para preparar
cruz luminosa con estas palabras: Por este signo ven asi el triunfo del cristianismo? 2.° Es preciso suponer
cerás; que los soldados que le acompañaban habian que todos los soldados de su ejército eran cristianos, lo
sido testigos de este prodigio. Añadió que á la noche que no fue posible en atencion á que este príncipe no
siguiente se le apareció Jesucristo, y le habia manda habia abrazado aun la religion cristiana; uuos solda—
do estableciese una insignia militar adornada con el dos paganos no podian tener ningun respeto ni con—
signo que habia yisto. Constantino la hizo ejecutar con fianza alguna en el nombre ni en la señal de Jesucris
efecto: á cuyo distintivo se le llamó el labarum. Des to; era de temer, por el contrario, que este signo, de—
pues de su victoria, este príncipe hizo colocar en Ro testado , por los paganos, los hiciese desertar y pa—
ima su estátua, la cual lenia en la mano una lanza en sarse á las filas de Maxencio. 3." Despues de ir
forma de cruz con esta incripcion: Por la virtud de alcanzado una vez la victoria contra Maxencio ¿qué
este signo he libertado á vuestra ciudad del yugo de la interés podia tener Constantino en hacer pnblicar por
tirania, etc. Eusebio en la vida de Constantino, lib. 1." medio de sus enseñas colocadas en las banderas, por
c. 28 y sig. aseguró que oyó este hecho de la propia su eslatua y demas monumentos la impostura que ha
boca de este emperador, el cual habia asegurado con bia forjado para inspirar valor á sus soldados? ..º Me
juramento, y dicho que habia visto mas de una vez nos interés tenia ann en repetir esta fábula á Euse
el labarum. Tambien habla de este suceso en el pa bio doce ó quince años despues, en afirmarlo con ju—
negírico de este príncipe, pronunciado á su presencia ramento, en decir que el prodigio habia sido visto
el trigésimo año de su reinado, ósea el año 335. Oration por los soldados que le acompañaban en aquella oca—
de laud. Const., c. 6, et9. Constantino mismo para sion. Si esto no fuese cierto, los paganos, con espe
hacer alusion á esto en su discurso á la asamblea de cialidad los soldados, debieron mofarse del ardid del
los santos. Orat. ad sanctor. caetum. c. 26, cuando emperador, y obslinarse mas en la profesion del pa
dice que sus hazañas militares comenzaron en virtud ganismo. Por una parte se atribuye á este príncipe
de una inspiracion de Dios. una política astuta en sumo grado, y por otra una im
Lactancio, autor contemporáneo, Lib. de Mort. prudencia inconcebible. 5." La vision de Constantino
persec., c. , dice únicamente, que Constantino fue no es en el fondo una prueba muy necesaria para el
advertido en sueños, hiciese grabar sobre los escudos cristianismo; puede ácilmente pasarse sin ella; no
de sus soldados el signo celestial de Dios antes de co vemos que los que la refieren deduzcan de ella conse
menzar el combate, y que en electo, hizo grabar sobre cuencia ni ventaja alguna. Por consiguiente tuvieron
los escudos de los soldados el signo de Jesucristo. Só— menos interés en acreditarla, que los protestantes en
crates, Sozomeno, Filostorgo, Teodoreto, Optaciano, hacerla sospechosa. Véase ademas Vidas de los Padres
y Porfirio, en un poema en alabanza de Constantino; y de los martires 18 de agosto.
dos oradores paganos en los panegíricos de este prínci III. Los acusadores modernos de Constantino le
pe; el poeta Prudencio y otros confirman la narracion niegan la cualidad de sabio legislador, porque con—
de Eusebio. cedió inmunidades á los clérigos, y dió lugar á que se
Hasta el siglo XVI, ningun escritor la habia impug aumentase su número; porque otorgó á, los obispos
nado; mas como los protestantes vieron que podia grandes privilegios, en particular el de libertar á los
servir para autorizar el culto de la cruz, muchos de esclavos, porque protegió el celibato, aboliendo la
ellos emprendieron quitarla toda creencia. Dijeron ley, Papia Poppaca , la cual privaba á los celibatarios
ue todos los testimonios que se han presenlado en de las sucesiones colaterales. Aunque Constantino hu
avor de este milagro se reducen en el fondo al de biera sido injusto en decretar todo lo que acabamos
Constantino; que esto fue por su parte una astucia de referir, lo que no es asi, se habria destruido por
militar para animar á sus soldadosal combate Chaus esto el bien que debieron producir mas de cuarenta
sepie, en el Suplemento al Diccionario de Bayle, ha leyes muy sábias que hizo acerca de diversos objetos
reunido todas las objeciones y conjeturas de estos de policia? Se hallan en el Código Teodosiano; Tille—
¿ Christianae, mont las estracto; mas por un rasgo de equidad ejem
críticos. Mosheim ha hecho lo mismo.
sac. , p. 978. Los incrédulos modernos se creye plar nuestros críticos las pasan en silencio: seria de
*-
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masiado largo formar un estracto detallado de estas torio. 3." Una carta que lbas, obispo de Edesa, habla
leyes y demostrar los felices efectos que produjeron. escrito á un persa llamado Maris. Muchos obispos, lo
Véase el Tratado de la verdadera religion, t. 11, c, 10, mismo que ¿ juzgaban que era necesa
art. 1.º, S. 9. rio condenar estas obras, porque los nestorianos se
Pero Constantino era mejor político que los que se servian de ellas para autorizar sus errores, y preten
atreven á vituperarle; Concedió á los médicos y á los dian que estos mismos escritos habian sido aprobados
profesores de bellas letras las mismas inmunidades por el concilio de Calcedonia, lo cual era falso. Los
que á los clérigos; mas lejos de aumentar el número eutiquianos por su parte ¿
la condenacion de
clérigos, mandó que no se ordenasen sino los sufi estos escritos, para tapar la boca á los nestorianos;
cientes para ocupar los puestos de los que falleciesen, Teodoro de Cesarea, que era del partido de los euti—
en cuyo caso fueran preferidos los que no eran ricos. quianos acéfalos, habia aseguradó al emperador que
En tiempo de la república romana los pontífices tu bajo esta condicion sus secuaces se reconciliarian vo
yieron mayores privilegios los que jamas gozaron luntariamente con la Iglesia. º

los obispos; no se comprende cómo ciertos filósofos se Por otra parte, aun entre los católicos, con espe—
atreven á acriminar á este emperador por haber fa cialidad entre los occidentales, muchos desaprobaban
cilitado la libertad de los esclavos, estando el imperio la condenacion que Justiniano por su propia autori—
desplobado á causa de las guerras civiles y estrange dad habia hecho de los tres capítulos; unos, porque
ras quehabian precedido. Para poblarle de nuevo con estaban persuadidos de que estos escritos eran orto
cedió varias parles de terreno á trescientos mil sár— doxos, y que los nestorianos eran injustos en preva—
matas, ¿ de su pais por otros bárbaros. La ley lerse de ellos; otros, porque creian que estas obras
Papia Poppara era injusta y absurda, porque castiga habian sido en efecto aprobadas el concilio de
ba á los inocentesigualmente que á los culpables; ade Calcedonia, y que la demanda de los eutiquianos no
mas, no habia producido ningun efecto; es falso que era mas que un ardid imaginado para debilitar la au
despues de su abolicion el celibato se haya hecho mas toridad de este concilio; y por fin, otros, á causa de
comun que lo era antes. - ¿ les parecia indecoroso procesar á los difuntos y
Fhmalmente, se ha escrito y repetido que Constan— eshonrar la memoria de tres obispos fallecidos en la
tino empleó la violencia y los suplicios para estermi comunion de la Iglesia.
nar el paganismo y colocar la religion cristiana en su Tal era el parecer del papa Vigilio. Llamado á
lugar; esta es una calumnia que refutaremos en el Constantinopla el año 56 por Justiniano, y atormen
artículo EMPERADoR. lado por este emperador, consintió, en fin, despues
de dos años de resistencia y despues de haber con
Constantinopla. Ademas de los concilios par— sultado á un sínodo de setenta obispos, en condenar
ticulares que se celebraron en esta ciudad, hay cuatro los tres capítulos; lo efectuó por medio de un escrito
considerados generales ó ecuménicos. El primero fue público que fue titulado JudicatumóConstitutum, pero
convocado el año 381 por órden del emperador Teo— que contenia la cláusula, sin perjuicio del concilio de
dosio y compuesto de alrededor de ciento cincuenta Calcedonia. Esta condescendencia no dejó de malquis
obispos orientales, de los cuales un gran número era
tar al papa con los obispos de Africa y de Italia. En
recomendable por su capacidad y por sus virtudes. vano Justiniano empleó la violencia para alcanzar de
Despues de haber colocado un obispo legítimo sobre él una condenacion pura y simple; Vigilio solicitó la
la silla de esta ciudad, que estaba ocupada por un convocacion de un concilio general, y la consiguió.
intruso, el concilio condenó de nuevo á los arrianos Entre tanto retiró su Judicatum y la firma de los obis
y eunomianos; proscribió los errores de Macedonio, ¿ que habian suscrito á él, y prohibió, bajo pena
el cual negaba la divinidad del Espíritu Santo, y el e escomunion, se escribiese nada en pro ó en contra
de Apolinar, quienes impugnaban la verdad de la de los tres capítulos antes de la decision del concilio.
Encarnacion. En consecuencia decidió que el Espíri Cuando se reunió, Vigilio se negó á asistir á él,
tn Santo es consubtancial al Padre y al Hijo; que es porque no habia mas que un número muy corto de
tas tres personas tienen una sola y misma divinidad; obispos del Occidente, y porque ademas previó que
confirmó el símbolo de Nicea é hizo ademas algunas los votos no serian emitidos con libertad. Ilabiendo
adiciones relativas á los nuevos errores; en fin, com el concilio condenado absolutamente los tres capítulos
puso algunos cánones de disciplina. Al año siguiente y pronunciado el anatema contra los autores, no es
l

el papa Dámaso, y á continuacion los obispos de Oc— cierto que Vigilio suscribiese á él; muchos pretenden
cidente, aceptaron las decisiones de este concilio; que no lo verificó nunca; otros presentaron un Cons—
esto es lo que le dió la autoridad de un concilio ge— titutum de este ¿ , del año 55 , en que declara
neral. despues de ¿ er examinado mejor los escritos
El segundo, que es llamado tambien el quinto ge e que se trata, los juzgó dignos de condenacion.
neral, fué convocado por el emperador Justiniano en Este documento se halla en las nuevas colecciones de
553 en presencia del papa Vigilio, quien no quiso, Balucio.
sin embargo, asistir á él; se reunieron lo menos ciento Esta condenacion causó un cisma entre los obispos
cincuenta obispos casi todos orientales. El motivo de de Occidente, persuadidos siempre de que los tres
la convocatoria era el de condenar los tres capitulos. capítulos, habian sido aprobados por el concilio de
Se entendian bajo este nombre: 1.º Los escritos de Calcedonia. La division entre ellos duró mas de un
Teodoro de Mopsueta. 2." Los que Teodoreto, obispo siglo; tambien duró largo tiempo entre los orientales,
de Ciro; habia compuesto para refutar los anatema de los cuales unos se pronunciaron por el nestoria
tismos dirigidos por S. Cirilo Alejandrino contra Nes. nismo, otros por los errores de Eutiques, y otros en
 CON (99) CON
fin por la doctrina católica establecida por el concilio ortodoxa, S. y 22; esto es una falsedad. Él mismo
de ¿ Toda la cuestion se reduce á saber si reconoce que no se habia hablado acerca de Teodoro
los tres capítulos habian sido aprobados por el conci de Mopsueta en Calcedonia, sino al tratar del escrito
lio de Calcedonia. • . *. de Ibas, de lo que concluye que ni su persona ni sus
1." Nada se ve en las actas de este concilio, ni en escritos podian haber sido condenados por este conci
los escritores contemporáneos, de donde se pueda , lio; ¿ por la misma razon no podian tampoco ser
inferir haberse tratado en él de las obras de Teodoro aprobados por él. El asunto de Ibas no era el exámen
de Mopsuela. Este obispo murió en 2%, antes que de su carta á Maris, sino acerca de sus opiniones ac
Nestorio, su discípulo, hubiera publicado sus errores. tuales ó personales.
Al condenar de nuevo á Nestorio, el concilio de Cal— Despues de haber pintado del modo mas odioso
cedonia juzgó haber proscrito, mas bien que apro— la debilidad, las incertidumbres, las variaciones ó
bado, los escritos en los cuales este heresiarca habia cambios de conducta del papa, Vigilio, se siente
bebido su doctrina. obligado á convenir en que el juicio de este pontífi—
2." Teodorelo é Ibas asistieron á este concilio; ce, despues de la decision del concilio de Constanti
no se podia dudar de su creencia personal, puesto que nopla, era sabio, que distinguió juiciosamente el
uno y otro suscribieron sin vacilar á la condena hecho del derecho. Por una parte, criticó los errores
cion de Nestorio. Si habia algunas cosas reprensi de Teodoro de Mopsuela acerca de los estractos de
bles en sus escritos, el concilio estaba persuadido de sus libros que se los habian sugerido; por otra, no
que habia variado de opinion. No hubo por tanto in queria que fuese condenada su persona, pues habia
justicia en reconocerlos como ortodoxos, y restable— muerto en la paz de la Iglesia lo mismo que Ibas
cerlos ó reponerlos en sus sillas, de las que habian si Teodoreto. S. 17. Los PP. de Constantinopla hu
do depuestos dos años antes por Dióscoro y por el bieran sin duda hecho esto mismo, si no se hubieran
falso concilio de Efeso, al que este presidió. Se sabe visto instigados por los clamores de los eutiquianos
ademas que Teodoreto habia abandonado absoluta— y por la obstinacion de Justiniano. Su rigor en la
mente el partido de Nestorio, y se habia reconciliado condenacion de las personas, fue lo que indignó á
sinceramente con san Cirilo; en consecuencia desa los occidentales; pero digámoslo de una vez, este
probó suficientemente lo que habia escrito antes con proceder en nada perjudica á la cuestion de dere—
ra este santo doctor. ¿Qué necesidad podia haber de cho, que era la de saber si los escritos en sí mismos
examinar sus escritos? Ibas se hallaba presente para eran dignos de censura; pues nosotros defendemos
dar razon de lo que habia dicho en su carta á Maris, que lo eran, y que la condenacion de estos escritos
la cual no causó ruido por entonces. El concilio juzgó no es injusta, apesar de cuanto diga Basnage en con
acerca de la ortodoxia personal de estos dos obispos, trario, 8.
sin establecer nada respecto á sus escritos. De esto mismo resulta, que no se debe creer en
3." La impostura de los nestorianos ¿ publi teramente todo cuanto se ha escrito por una y otra
caron que estos escritos, habian sido aprobados por parte, en especial por los africanos, quienes juz—
este concilio, nada prueba por consiguiente; la pre gan acerca del papa Vigilio y del concilio de Cons—
vencion de los que los creian bajo su palabra era tantinopla segun su prevencion; no se hallaban en
mal fundada, y el artificio de los eutiquianos, quie— muy buen estado para pesar el valor de las espre
nes se jaclaban de destruir la autoridad del concilio siones griegas contenidas en los tres capítulos. Este
de Calcedonia, haciendo que fuesen condenados los concilio no fue general ó ecuménico, ni en su convo
nestorianos, no pasaba de ser una ilusion. Trataron cacion, ni celebracion, ni en su conclusion; no se
de aumentar la division y perturbar la Iglesia, y na yolaba en él libremente, y solo se juzgó general por
da de esto consiguieron. la aceptacion universal que le prestó la Iglesia en
..." . Para que el concilio de Constantinopla lu— lo sucesivo. Basnage infirió de aquí sin ningun fun—
viese derecho de condenar los tres capítulos, basta— damento, que los que le desechaban, no creian en la
ba que las espresiones contenidas en estos escritos infalibilidad de los concilios ecuménicos, S. 22; los
no fueran bastante claas ni exactas, y que dieran occidentales no lo consideraban como tal.
lugar á los nestorianos para autorizar sus errores. El tercero de los concilios de Constantinopla, co
Los autores habian podido enmplearlas inocentemente locado entre los concilios generales, se celebró el año
antes de las condenaciones reiteradas de Nestorio; 680 bajo el reinado del emperador Constantino Po
pero se debia proscribirlas desde el punto en que la gonato, y bajo el ponlificado del papa, Agathón; este
Iglesia habia esplicado formalmente su creencia. Si es el sesto ecuménico. Se compusó de cerca de se
este concilio avanzó demasiado, deshonrando la me— senta obispos, y se reunió para condenar el error de
moria de sus autores, este esceso de severidad nada los monotélitas, el cual era un vástago del euliquia
tiene que ver con la fé. nismo, Eutiques habia pretendido que en Jesucristo
Basnage, que escribió una larga historia del quinto la divinidad y la humanidad estaban unidas de tal
concilio general, llena de invectivas, debia haberse suerte, que nó formaban mas que una sola naturale
hecho estas reflexiones. Hist. de la Iglesia, lib. 10, za. Los monotelitas sostenian que no habia en Jesu
c. 6. Se obstina en suponer que el concilio de Calce— cristo mas que una sola voluntad y una sola opera
donia habia aprobado tres capítulos; que el con cion. El concilio, por el contrario, despues de haber
denarlos en el de Constantinopla, era reformar el declarado que se adheria á los decretos de los cinco
¿ y los decrelos de Calcedonia, y atentar contra concilios generales precedentes, decidió que habia
la autoridad mas venerable que se ha conocido; que en Jesucristo dos naturalezas distintas y completas,
este concilio habia decidido que la carta de Ibas era y revestida cada una de sus facultades y de sus ope
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raciones propiás, y por consiguiente, dos voluntades sion, es notable: , contiene el concilio de Cons
y dos operaciones, la una divina y la otra humana. tanza, legítimamente reunido en nombre del Espí
Entre los autores del monotelismo que condenó, ritu Santo, formando un concilio general que repre
nombró al papa IIonorio, porque en una carla que senta á la Iglesia católica militante, ha recibido in—
escribió á Sergio, patriarca de Constantinopla, au mediatamente de Jesucristo una polestad á que toda
tor y defensor " monolelismo, este papa parece persona, de cualquier estado y dignidad que fuese,
haber enseñado el mismo error. 'éase \loNoTELIsmo. aun papal, está obliga a á obedecer en lo que con
Se considera comunmente como una continuacion de cierne á la fé, á la estirpacion del cisma y reforma
este concilio el que se celebró en el mismo lugar doce de la Iglesia en su cabeza y en sus miembros. Nada
años despues, en 692, y el cual fue llamado el con falta á esta decision para tener una plena autoridad,
cilio in Trullo, porque se reunió, como el preceden pues que Marino V, elegido papa en el mes de no
te, en una sala del palacio, imperial, cubierta con viembre de 117, espidió inmediatamente despues
una cúpula; se le llamó tambien Quiniseacto, porque de su eleccion una bula, por la que quiere que el que
tenia por objeto arreglar la disciplina, acerca de la uera sospechoso en la fé, jurase que admilia todos
cual los concilios quinto y sesto nada hablan estable— los concilios generales, y en particular el de Cons
cido, porque renovó los decretos de estas dos asam tanza que representa la Iglesia universal, y que todo
bleas. Justiniano II era entonces emperador, y Ser cuanto fue aprobado y condenado por este concilio,
gio I ocupaba la silla romana. Doscientos once obis fuese aprobado y ¿ por todos los fieles. Por
pos asistieron á este concilio é hicieron 102 cánones consiguiente, este ¿ aprueba y confirma él
de disciplina, los cuales fueron constantemente se mismo lo que se habia decidido en la cuarta sesion:
guidos desde aquel tiempo en la Iglesia griega; mas lo mismo hizo en las dos bulas contra los husitas el
todos estos decretos no fueron adoplados por los papas 22 de febrero de 118; y en la última sesion tambien
ni por la Iglesia latina, porque habia, muchos de confirmó espresamente todo cuanto se habia hecho en
ellos que no estaban conformes con la disciplina es plena asamblea, conciliariter. Este mismo decreto
tablecida en Occidente. fue aprobado y confirmado de nuevo por el concilio
El octavo concilio general, reunido tambien en de Basilea en 131. Esta es tambien la doctrina á
Constantinopla el año 869, bajo el papa Adriano II la que el clero de Francia hizo profesion de adherirse
y el emperador Basilio, se compuso de 102, obispos. siempre, con especialidad en su asamblea de 1682.
Se propuso por medio de esta asamblea el reparar * Se duda, por el contrario, que el concilio de Cons
los daños que habia causado la intrusion de Focio en tanza sea ecuménico en las sesiones cuarta y quinta,
la silla de Constantinopla, y las consecuencias del porque las tres obediencias de Gregorio XII, de Juan
cisma que habia establecido entre la Iglesia griega y XXIII y de Benedicto XIII no aparecian aun reuni—
la Iglesia romana. Se formaron en este concilio vein-º das en la asamblea, y porque las tres convocaciones
lisiete cánones de disciplina, y se renovó en él, la á... nombre de estos tres pontífices, que el mismo con—
condenacion de los errores que habian sido proscrip cilio habia juzgado necesarias para disipar las dudas
los por los concilios precedentes. acerca de su propia legitimidad, aun no habian teni
Diez años despues, habiendo conseguido Focio ser do lugar. Se duda tambien que los decretos conteni
repuesto en la ¿ de Constantinopla, despues de la dos en la cuarta y quinta sesiones hayan sido confir
muerte del patriarca Ignacio, halló el medio de reu mados por Martino V, en atencion á que, en su bula
nir cerca de cuatrocientos obispos, y de hacer anu de confirmacion, este papa no habla sino de la con
lar todo cuanto se habia hecho contra él; dió á este denacion de los errores de Wiclef, de Juan Ilus y de
falso sinodo el nombre de octavo concilio general, y Gerónimo de Praga, contentándose por lo demas
fue considerado como tal por los griegos desde que con decir que aprueba todas las cosas que fueron he
consumaron su cisma con la Iglesia latina. Véase chas conciliariter. Se ha disputado por otra parte si
GRIEGos. estos decretos deben entenderse ¿ respecto
al tiempo del cisma y cuando no se sabe quién es el
Constanza. El concilio general celebrado en verdadero papa, ó in si es preciso entenderlos
esla ciudad se reunió á fines de octubre de 11, y igualmente en otros casos en que el papa es cierto y
duró hasta el mes de abril de 1 18. Uno de los prin reconocido por todos los católicos.)
cipales objetos de esta asamblea era poner fin al cis En la décima quinta sesion, el concilio condenó los
ma, que duró desde 1377, entre muchos pretendien errores de Wiclef y de Juan Ilus, que habia ya pros
tes al pontificado, y todos los cuales tenian partida crito en la oclava. Como Juan Hus no quiso some
rios. Aun habia res en aquel, tiempo, á saber, terse á esta condenacion, ni retractarse, fue declarado
Juan XXIII, quien habia convocado el concilio, Gre— hereje, degradado y entregado al brazo secular que
gorio XII y Benedicto XIll; estos dos últimos habian le hizo padecer el suplicio del fuego. Gerónimo de
ya sido depuestos en el concilio de Pisa, cinco años Praga, su discípulo, despues de haberse retractado
antes, y lo fueron de nuevo en Constanza: el conci en la décima nona sesion, desaprobó esta retracta—
lio depuso tambien á Juan XXIII, y eligió en su lu cion; en la vigésima prima, sostuvo obstinadamente
gará Martino V, el cual fue universalmente recono sus errores, y tuvo la misma suerte que su maestro.
cido. Los demas objetos eran el condenar los errores El concilio, en la tercera, pronunció el anatema
de Juan Ilus y de Gerónimo de Praga, que eran los contra los que defendian que la comunion bajo una
mismos que los de Wiclef, y reformar la Iglesia, tan sola especie era ilegítima y abusiva; este era uno de
to respecto á su cabeza cuanto en sus miembros. El los errores de Juan Hus En la décimaquinta, decla
decreto de este concilio, publicado en la cuarta se ra herética, escandalosa y sediciosa la proposicion
 (ON 301 COX.
de Juan Petit, doctor de Paris, el cual, en 193, son por lo menos del tercer siglo, y anteriores al con
habia defendido públicamente que es permitido usar cilio de Nicea. Véase los Pi”. apost., tom. 1, p. 190
de sorpresa, de traicion y de toda suerte de medios y siguientes.
para deshacerse de un tirano, y que no se está obli Moshein, en sus disert. acerca de la hist. eccles,,
gado á guardarle la fé que se le prometió. En las se— tomo 1, p. 11, juzga que las constituciones apostóti
siones 0, 2 y 3, se formaron algunos decretos cas ºrn escritas en el tercer siglo; tomo 2, pági
para reformar los abusos introducidos en la disciplina. na 163 dice que lo estaban ya en el segundo.
Muchos protestantes y muchos , incrédulos han El padre Lebrun, Esplic. de las ceremonias de la
acusado al concilio de Constanza de haber traspasado misa, tomo 3, p. 19 y sig., opina que no fueron escri
el derecho, natural y las ley es de la justicia y de la tas ailes del fin del siglo IV. Hay un medio de conci
humanidad, entregando á Juan Hus al brazo secular iar estas dos opiniones, á saber; que los primeros
para ser castigado con el último ¿ á pesar del libros de esta coleccion pueden haber sido compues
salvo-conducto que se le habia dado por el empera los mucho tiempo antes que los últimos, con especia—
dor: esta es una calumnia que reularemos en el artí— lidad, antes del octavo que contiene la liturgia. El
culo HusITAs. concilio in Trullo, celebrado en el sétimo siglo, dice
positivamente en el cánon segundo, que esta obra ha
Constitucion. Decreto del soberano pontífice sido alterada por los herejes; de aquí los vestigios de
en materia de doctrina. Este nombre se dió, princi arrianismo que en ella se hallan.
palmente en Francia, á la famosa bula del papa Cle
mente XI del mes de setiembre de 1713, que comien * Constitucion etvil del elero, y cons -
za con eslas palabras: Unigénitus Dei filius, y el cual titueionales. En el momento en que la asamble y
condena ciento diez proposiciones, sacadas del libro nacional entabló la regeneracion de la Francia, se
del padre Quesnel, intitulado: El Nuevo Testamento sucedieron las , reformas con una increible rapidez.
con refleaciones morales, etc. V. UNGENITUs. Desde el 20 de agosto de 1789, habia formado la
COÑSTITUCIONES APOSTÓLICAS. Llámase asi asamblea en su seno una comision llamada eclesiástica,
una coleccion de reglamentos atribuidos á los apósto encargada de presentar proyectos de ley acerca de
les, que se supone haber sido formada por S. Cle— las materias relativas á la religion y al clero. Esta
mente, y los cuales llevan su nombre. Estas consti comision, en la que los eclesiásticos se hallaban en
tuciones estan divididas en ocho libros que contienen minoría, contaba entre otros á los cuatro abogados
un gran número de preceptos relativos á los deberes jansenistas, Lanjuinais, Martineau, Treilhard y Du—
de los cristianos, y en particular á las ceremonias y la rand de Mailhane. El 7 de febrero de 1790, hallán
disciplina de la Iglesia. dose dividida la comision, se asoció á ella un refuer
Casi todos los sabios convienen en que son supues— zo de quince nuevos miembros, escogidos entre los di
las, y prueban que son muy posteriores al tiempo pulados mas afectos al nuevo órden de cosas: en este
de los apóstoles: no comenzaron á aparecer hasta el número se incluian muchos curas párrocos, Massieu,
cuarto ó quinto siglo, y por lo tanto no es S. Clemen Explilly, Thibault, el cartujo dom Gerle, Dupont de
te el autor de estasconstituciones. Nemours, el abogado Chasset, etc. Desde entonces
Whiston no titubeó en declararse contra esta opi prevaleció en la comision el sistema de las innova—
nion universal y empleó muchos raciocinios y abun— ciones, la cual adelantó su trabajo acerca de las re—
dancia de erudicion para probar que las constitucio formas proyectadas. Cuatro informes sobre este obje
nes apostólicas son una obra sagrada, dictada por lo fueron compuestos por Chasset, Martimeau, el abate
los apóstoles en sus asambleas, y puestas en escrito Explilly y Durand de Mailhane. Desde el 29 de mayo
por S. Clemente. Quiere hacerlas considerar como un al 13 de julio de 1790, se discutió la nueva constitu—
suplemento al Nuevo Testamenlo, como la esposicion cion del clero, cisma tanto inas monstruoso cuanto
fiel de la fé cristiana y del gobierno de la Iglesia. que encerraba en su seno el gérmen de todas las he
Véase su ensayo acerca de las constituciones apostólicas rejias. El título 1."tralaba de los oficios eclesiásticos,
y su prólogo histórico. Como este autor profesaba el el 2” del nombramiento para los beneficios, los 3.º
arrianismo ó el socinianismo, no es de admirar que se y .” del sueldo de los ministres de la religion y de
declarase en favor de una obra en la cual hallo mu la ley de residencia; los dos primeros contenian los
chos pasajes que le parecieron conformes á su opinion. principales artículos de esta constitucion que atacaba
Mas esio es justamente lo que hace á este monu— la gerarquía de la Iglesia y destruia su unidad.
mento muy sospechoso. En efecto estas prelendidas Lo que distingue principalmente al cisma consti
constituciones apostólicas propenden en muchos pa tucional de todos los demas, es el principio en que se
sajes al arrianismo, contienen anacronisinos y opinio fundaba, principio colocado por la reforma y desen
nes singulares acerca de muchos puntos de la reli vuelto por la filosofia en sus mas estremas consecuen
gion. Sin embargo, no puede negarse que esta colec cias. Jesucristo ó el Verbo, el pensamiento de Dios
cion contenga muchos trozos y a de liturgios antiguas, hecho sensible, vino á revelar á los hombres toda
ya varias reglas de disciplina observadas en los verdad, no solo las verdades religiosas, sino tambien
iempos apostol cos. Tal ha sido el juicio que acerca las sociales ó políticas, como se deja conocer por estas
de esla coleccion han formado, no solo los críticos ca palabras: «Toda potestad viene de Dios», y en él se
tólicos, sino ademas Grabe, Ilirks, Beveridge y algu— halla solamente la razon del poder y de la obediencia,
nos otros protestantes Inoderados. Se conviene con sin cuyos requisitos no puede existir sociedad alguna.
bastante generalidad en que los cincuenta cánones de La filosofia o el pensamiento del hombre, orígen de
los apóstoles que hacen parte de estas constituciones, todo error, desechando con orgulloso desden esta 69
TOMO I,
 CON 502 (CON

máxima del cristianismo, estableció por principio abalia á los obispos hasta el punto de no considerarlos
que «toda potestad viene del hombre»; de donde se sino casi como simples curas párrocos, se elevaba á
sigue que donde hay mayor número de hombres, hay simples sacerdoles hasta el episcopado, puesto que
tambien mayor potestad; ó en otros términos, que el sus volos en el consejo, donde iodo se decidià á
pueblo es la ¿ suprema; de donde se infiere pluralidad, tenian tanto peso como el del obispo.
tambien que la voluntad del pueblo es su única regla; Es imposible no reconocer aqui los principios de la
porque si hubiera fuera de él otra regla á la que fue secta janserística, que hacia largo tiempo solitaba
se preciso obedecer, no seria ya independiente, ni con sus votos y preparaba por medio de sus intrigas
tampoco seria soberano. Mas si toda potestad viene el trastorno de la disciplina ; y los atentados de la
del pueblo, por consiguiente tambien la polestad espi asamblea constilº y ente no eran mas que la conse
ritual, dijo la asamblea constituyente; y el pueblo cuencia y el efecto de las usurpaciones de los parla—
en consecuencia de este axioma instituyó pastores mentos. Estos últimos, erigiéndose en jueces en el ór
para reprimir sus viciosas inclinaciones y suspensa den espiritual, oprimian á los obispos en el órden
mientos criminales, como nombraba magistrados pa de sus funciones; la asamblea constituyente, en virtud
ra castigar sus acciones culpables. La asamblea deci de la delegacion de pueblo, creyó poder crear é ins—
dió que los obispos fueran nombrados, igualmente tiluir por sí misma prelados.
ue todos los funcionarios y magistrados, á pluralidad 1 º lºs evidente mente herética esta constitucion
e votos Dios era, por decirlo asi, creado en la socie civil del clero, la cual trastorna muchos dogmas fun—
dad por la potestad del hombre; monstruoso trastorno damentales de muestra fé. Tales son incontestable—
de todo órden religioso y político, que debia necesa mente la autoridad divina que la Iglesia ha recibido
riamente y bien pronto venir á parar en un ateismo de Jesucristo para gobernarse á sí misma, autoridad
abierto y en una anarquia declarada! que tiene necesariamente como sociedad, y sin la
Largó tiempo hacia que la marcha de las delibera cual no puede ni conservar sus prerogativas esencia—
ciones de la asamblea hizo prever que se iria á parar les, ni cumplir sus gloriosos destinos; su independen
en una escision abierta con el centro de unidad. Un cia absolula del poder civil en las cosas puramente
diputado, á fin de poner la constitucion eclesiástica espirituales; el derecho que tiene ella sola, como
¿ reino en armonia con la constitucion administra juez único y supremo de la fé, de fijar la fórmula de
tiva, habia pedido que se suplicase al rey recurriese, profesion de esta fé y prescribirla á sus ministros nue
segun los sagrados cánones, á la potestad espiritual, vamente elegidos. Tales son ademas el primado de
de modo que proveyese á la ejecucion de este plan jurisdicion que el papa, vicario de Jesucristo en la
segun las formas eclesiásticas. Los diputados de la tierra y pastor de los pastores, tiene por derecho di
izquierda que formaban la mayoría de la asamblea, vino en toda la Iglesia, y que en la hipótesis de la
declararon que esta proposicion no podia dar lugar á constitucion civil del clero, se reducia á un vano tí
ninguna deliberacion, pues añadieron el abate Gre tulo y un puro fantasma de preeminencia; la superio—
goire y Lanjuinais que la intencion de la asamblea era ridad no menos real del obispo sobre los simples sa—
reducir la autoridad del papa á sus justos límites, y cerdotes á quienes esta constitucion quiso, sin embar—
el comité no habia creido necesario hacer un artículo go, elevar hasta él, haciéndolos sus iguales, y aun
adicional para reconocer el poder del obispo de Ro frecuentemente sus jueces; en fin, la necesidad in—
ma. Se consentia con la mayor hipocresía en que se dispensable de una mision canónica y de una juris—
le considerase como gefe visible de la Iglesia; se em dicion ordinaria ó delegada, para ejercer válida y
peñaba á los obispos á escribirlo, á mantener con él lícitamente las augustas funciones del santo minis
correspondencias acerca de la religion, en señal de la terio.
comunidad y de la unidad de la fé que enlaza á todos 2." Es manifiestamente cismática esta constitu—
los cristianos; mas se rehusaba á su primer pastor to—
cion que trastorna los títulos, los territorios, y todos
da especie de autoridad para dirigir su Iglesia. Aun
los grados y poderes de la gerarquia; que, en virtud
los que tenian la vista más alucinada vieron entonces
de una autoridad puramente secular, y por conse
con bastante claridad que era no tanto el poder del
cuencia incomplela, quita la mision y la jurisdicion
papa como á la misma religion católica á la que se
á los verdaderos pastores de la Iglesia, para conferír
queria echar por tierra, y que cambiando la discipli
sela á otros que la Iglesia no conoce; y que levanta
na de la Iglesia, se esperaba nada menos que destruir
de este modo altar contra altar, rompe ésta cadena
el dogma. preciosa y venerable que sube hasta los apóstoles, y
Despues de haber trastornado por medio de una separa con violencia á los files de sus pastores legí
nueva constitucion la antigua constitucion francesa, timos, y á toda la Iglesia galicana del centro del ca
obra de la religion y del tiempo, era la religion cató— lolicismo.
ica á la que se atacaba, introduciendo en ella el pres M. de la Lucerne refutó victoriosamente la preten
biterianismo, como se habia establecido, al menos por sion de los constitucionales, á saber, que la potestad
principio, la democracia en el Estado. La magestad po ítica es competente para ordenar en la Iglesia una
real no era mas que un fantasma; se quiso hacer del distribucion nueva de merópolis, de diócesis y de
episcopado un nombre vano. Cada obispo, precisado parroquias. Dice (Instruccion pastoral acerca del cis
á obedecer á las voluntades de su consejo, no era en ma de Francia):
el fondo sino un gefe de consistorio, el primero entre «Todo lo que es necesario en la Iglesia la perte—
sus iguales; y su jurisdicion, limitada por todas nece, puesto que lo ha recibido de Jesucristo. Todo
partes como la potestad real, no ofrecia mas que cuanto arregló durante los tres primeros siglos, está
una sombra de autoridad. Y al mismo tiempo que se tambien bajo su dominio, como que no tenia enton—
 CON 503) CON
cºs sin lo que Jesucristo la habia dado. ¿Puede du ner los ministros. ¿Se dirá que al menos el modo de
darse de que la division de jurisdiciones entre los la division debe depender de los soberanos? ¿Mas
Pastores io sea una cosa necesaria? A la Iglesia, qué hay aquí tampoco de temporal en el modo de
pues, corresponde el arreglarla. ¿Se puede dispu— irir los poderes espirituales? ¿Qué título, qué
la tambien que, en los primeros siglos, decidió ella razon hay para poder atribuir al magistrado político
sºja este punto? Tambiea es, pues, por este título á el derecho de asignar á los obispos y á los sacerdo—
ella sola á quien toca decidirlo. ¿Se dirá que es ne—tes las almas que deben instruir, las conciencias que
cesario haya una division entre las jurisdiciones de deben dirigir? ¿Y no resultaria, por abandonar esta
los pastores, pero que no es necesario que la divi division al poder civil, el inconveniente que hemos
son sea lal ó cual? Lo que es necesario, es que haya manifestado ya? No habria en la Iglesia una division
la potestad encargada de arreglar esta division ; y uniforme; dándola cada gobierno la suya, aqui la
desde luego o puede ser la potestad temporal quien Iglesia se formaría bajo de un modelo, allí se cons—
la arregle; pues repugnaria á la razon que Jesu tituiria bajo de otro, y se le privaria de esta unidad
cristo hubiera encargado el decidir como se n de régimen tan preciosa y lan necesaria para su ad
de distribuir las facultades espirituales entre sus mi ministracion.
ºstros á una potestad, que con frecuencia descoiro «Concluvamos con asegurar que la Iglesia es á
ce estas facultades, y que aun algunas veces se empe— quien pertenece el repartir á cada uno de sus pastores
la en destruirlas. No repugnaria menos que hubiera la medida de mision y de jurisdicion que juzgue con
conado este poderá unas potestades diferentes, que veniente , estender ó limitar mas ó menos estos
dividieran la Iglesia, ya de un modo, ya de otro, y que poderes, circunscribirlos en los límites razonables, y
la qutasen la uniformidad de su régimen. en una palabra, el fijar los territorios donde los
«El gobierno de la Iglesia forma parte de su disci— ejerzan.... -

plina interior y necesaria; por consiguiente á ella es «Se objeta el que un Estado puede admitir ó no ad
á quien pertenece arreglarlo: asi, en toda socie— mitir una religion; puede, pues, admitirla con ciertas
dad, la distribucion de las jurisdiciones entre los condiciones. Cuando la religion católica fue recibida
magistrados, la medida, la esension, los límites del en las Galias, la potestad civil podia decirla: hé aqui
poder atribuido á cada uno de ellos pertenecen al go— ciudades para establecer vuestros obispos, hé aqui
hierno: los pastores de la Iglesia son sus magistra los territorios donde cada uno de ellos ejercerá su mi
dos; la polestad espiritual es, pues, la que gobierna nisterio. Lo que la nacion podia entonces, lo puede
á la Iglesia ; ella sola es la que tiene derecho para en todo tiempo; lo puede sobre todo en un momen -
repartir y distribuir entre ellos las jurisdiciones, y to en que se regenera y en que reforma todos los
asignar á cada uno los límites dentro de los cuales de abusos bajo los cuales ha gemido; por consiguiente
ben ejercer las funciones que les confia. tiene el derecho de designar las ciudades episcopales
«La Iglesia es quien confiere á sus ministros la y distribuir de nuevo las diócesis.
mision y la jurisdicion; seria un absurdo que tuvie «Antes de responder directamente á la dificultad
ra solo el derecho de darles sus facultades espiritua— es necesario aclarar el principio sobre el que se fun
les, y que la potestad temporal fuese quien arreglara da. Cuando se aventura esta máxima, cuando se ha
la l de poderes que aquella diese á cada uno de tenido el descaro suficiente para decir en la asamblea
ellos. Es evidente que la potestad que está encargada nacional, que el estado puede no recibir la religion
de cot.cederlos, es tambien la encargada de distri católica, ¿se quiere dará entender que el soberano
buirlos. puede proscribir esta religion y privar el ejercicio de
«Partiendo del principio de 1ue la Iglesia es la que ella? ¿Se entiende que puede negarla una protec
confiere la mision y la jurisdicion, resulta ademas cion particular, y no hacer de ella la religion de sus
otra consecuencia. Tal es que al designar súbditos á estados? En el primer sentido, la proposicion es tan
cada pastor, la lglesia le confiere estas facultades, falsa en el órden, político, como impía á los ojos de
como lo henos demostrado segun el concilio de Tren - la religion. El soberano no tiene derecho para quitar
to; ella es, pues, la que asigna los súbditos, y por con á sus pueblos lo que una autoridad de un órden su
siguiente es la que determina los territorios. perior les impone; su autoridad cesa donde la obliga
«Para aclarar aun mas la cuestion, analicémosla. cion de obedecerle termina. El poder de mandar y
Puede dividirse en dos; ¿la mision y la jurisdicion el deber de obedecer son dos cosas esencialmente
pastoral deben ser universales en todos los ministros correlativas é inseparables; y seria una cosa contra
ó repartidas entre ellos? En el caso en que se re dictoria el que un príncipe tuviera el derecho de man
artiesen, cómo deben se lo? Dízasenos á cuál de dar lo que sus súbditos no deben hacer.
as dos potestades pertenece el establecer, acerca de «Si se entiende el principio en el segundo sentido,
estos dos puntos que se indican, dónde comienza en es decir, si se declara que el soberano puede no ha
esla materia el poder civil; no se dirá ciertamente que cer de la verdadera religion una religion privilegiada,
á él es á quien toca decidir la primera cuestion, y tampoco prueba nada. Sin duda el Estado puede poner
ronunciar si la mision y la jurisdicion espirita á estas ventajas que concede ciertas condiciones que
es serán, en cada ministro, generales ó limitadas. no perjudiquen á la religion, que no la traigan nin
Esta cuestion no puede pertenecer de modo alguno gun cambió; el Estado proteje á la Iglesia católica tal
al órden ¿ pues que en nada interesa á la como ella es, tal como Jesucristo la fundó, con todos
sociedad política; por el contrario, afecta esencial los caracteres y toda la autoridad que este divino
mente al órden espiritual, como que consiste en sa fundador la dió. Si la altera en alguna cosa, en vir
ber la estension del poder espiritual que deberán te tud de las condiciones que pone, esla autoridad ya
 - CON 50%) CON
no es la Iglesia de Jesucristo á la que proteje, es otra ramente temporal fuera de la competencia de la igle
religion que compone á su capricho. El Eslado no sia. Pero la Iglesia no tiene un poder menor que la
puede, pues, admitir á la Iglesia con la condicion de potestad temporal para juzgar el número de pastores
que se encargará por sí misino de investir á los pasto necesarios para las necesidades de los pueblos; á ella
res de la mision y de la jurisdicion espiritual, y de es á quien toca enviarlos y enviar cuantos sean ne
darles súbditos sobre los cuales ejerzan estas facul cesarios para que todas las funciones sean ejer
tades. En la hipótesis que examinamos, el Estado di cidas en todas partes, y para que á ningun fiel le
ce á la Iglesia naciente, á la que recibe en su seno, y falten los auxilios de la religion. Si el Estado y la
á la cual concede favores: hé aquí ciudades para Iglesia no se conforman acerca de este punto, ya he
las sillas episcopales, territorio para el ejercicio del mos esplicado lo que acontecerá: cada una de las dos
ministerio pastoral; mas la Iglesia acepta la prepo— potestades permanecerá en sus derechos y los ejerce
sicion que la hace el Estado: en virtud de esta acep rá; el Estado no tendrá á sueldo mayor número de
tacion ¿? las sillas episcopales en las ciudades que
partores que el que halle conveniente, y la Iglesia,
el Estado la indicó; ella dá la jurisdicion y la mision por su parte, instituirá los que juzgue necesarios; y
sobre los territorios de este modo circunscritos á si entre estos hubiera algunos á quienes no se le re
los obispos que instituye. La potestad espiritual ra— tribuyese á espensas del público, se encontrarian en
tifica y consagra por medio de su adhesion lo que el caso en que estaban los apóstoles y los pastores
la potestad civil propuso; no es, pues, cierto que, de la primitiva Iglesia; la caridad de los fieles y su
en esla suposicion, sea la potestad temporal sola trabajo los sostendrian: de este modo se conservarian
quien establezca las sillas y quien divida las dió todos los derechos, y la diversidad de decision de las
- CºS S.
dos potestades no causaria entre ambas division al
«Sigamos la hipótesis en su segundo estremo. Lo guna.
que la nacion podia entonces, lo puede en lodo tiem «Los cismáticos, para eslablecer su sistema, impug
po; pero no lo puede sino del mismo modo que lo po naban el principio mismo de la division de las dióce—
dia antes, es decir, con el consentimiento de la Igle sis y de las parroquias. Sin duda, decian, es esen
sia. Siempre llena de consideraciones y de deferencia cial á la religion el tener por ministros á sacerdotes
para con los soberanos de la tierra, la Iglesia se ha y obispos establecidos unos en primero, y los otros en
lla constantemente dispuesta á todo cuanto se desea segundo orden, pero no es igualmente esencial que
* acerca de este objeto, y de esto tenemos un gran nú las diócesis y las parroquias esten divididas. Cuando
mero de ejemplos recientes entre nosotros. Todas las Jesucristo dió la mision á sus apóstoles, se la dió
nuevas erecciones de obispados, todas las separacio - universal y sin límites: Id por todo el mundo, predi
nes de territorios se han hecho por la Iglesia á invi cad el Evangelio á toda criatura. Hé aquí los lérminos
lacion de nuestros reyes, Mas son seguramente dos de que se sirve, nada se habla en esta mision acerca
cosas de todo punto diferentes, el que la potestad de la division de territorio: en todo el mundo, á loda
temporal declare á la potestad espiritual los cambios criatura es donde cada apostol debe anunciar la ver
que desea en la distribucion de las jurisdiciones ecle dad. Jesucristo no les dijo: Vosotros sereis árbitros
siásticas, y el que ambas se pongan de acuerdo para para circunscribir los lugares donde enseñeis.
ejecutarlas; ó que la potestad temporal sola sin re «Este raciocinio, o prueba mucho, ó no prueba na
currir y aun sin consular á la Iglesia, trastorne hasta da. Si Jesucristo, al enviar á sus apóstoles á que pre
los cimientos todo el orden de sus jurisdiciones, esta dicasen por toda la tierra, rechazó toda division de
blezca nuevas sillas y se apropie la jurisdicion espi jurisdición, la distribucion de los territorios es con
ritual de ellas, suprima las que existen hace un gran traria al precepto divino, y en este caso, ¿con qué
número de siglos y destruy a la jurisdicion que la derecho la asamblea nacional se permitió trazar una
Iglesia les habia dado; quile diocesanos á un obispo division semejante? Si, por el contrario, las palabras
para confiarlos á otro, En una palabra, la potestad del Salvador no escluyen las divisio es de jurisdic
civil puede al presente lo que pudo cuando la Iglesia cion, ¿qué se puede concluir contra el derecho de la
fue recibida en su seno; mas entonces no podia insti lalesia para formar estas divisiones?
tuir obispados, someter á ellos almas sin el concurso «Examinamos en sí mismo este testo del cual se ha
de la Iglesia; por tanto la potestad temporal es abso abusado tanto para impugnar todas las distribuciones
lulamente incompetente para la denmarcacion de las de territorios, al propio tiempo en que se forma otra:
diócesis y de las parroquias. Al cuerpo de los apóstoles y de sus su esores es á
«Pero, se responde, el Estado que paga 6 toma á quien Jesucristo dirige estas palabras: Predicad el
sueldo á los ministros, está interesado por su parte en Evangelio á toda criatura: la mision universal que
que el número de sus asalariados no sea escesivo: por contienen se dá, pues, á todo el cuerpo ó corpora
consiguiente tiene el derecho de arreglarlos; y si estas cion. Los apóstoles tenian dos modos de cumplirla; ó
disposiciones no vienen bien con las de la Iglesia, ¿se tomando cada uno el mundo entero por objeto de su
rá posible que esté obligado á pagar pastores que no ministerio, que hubiera sido entonces universal, ó
tiza necesarios? ¿Hay aqui tambien un derecho por distribuyendo entre sí las renes parles del mun
parte de la potestad espirituai? do, y marchando á anunciar el Evangelio cada uno
«No, sin duda; la potestad espiritual no tiene dere á la parte confiada á su celo. El precepto del Salva
ho para exigir que la potestad temporal señale suel dores, por consiguiente, susceptible de dos sentidos:
lº á sus pastores; no puede obliga la á que los pa la misión universal, que confiere al colegio apostólico
ue mas que lo que quiera. La retribucion de los pas— para ser dada ó á cada apostol en particular, ó al
lores, bajó cualquier forma que sea, es su juicio pu cuerpo entero para que se ejerciese distributivamen
 CON 505 CON
te por todos los miembros. No se puede conocer con prohibe usurpar el territorio cercano, y entrar en la
mayor seguridad cuál de los dos sentidos es el verda diócesis de si colega sin su permiso Can. 10.
dero, sino por el modo con que los apóstoles y la El papa san Celestino I recomienda, entre otras co
Iglesia lo han entendido. Desde luego nadie debió sas, á los obispos de la Galia que ninguno cometa
comprender mejor las palabras del Salvador que usurpacion alguna con perjuicio de otro, y que cada
aquellos á quienes se les dirigian para que las ejecu uno se contuviese dentro de los límites que se le hu
tasen; despues creemos, y este principio es la base de bieran designado. Ep. 2, ad episc. Galiae.
la fé católica, que á la Iglesia pertenece fijar el ver «El primer concilio de Constantinopla, que es el
dadero sentido de las divinas Escrituras. Asi que, ve segundo de los concilios generales, quiere que los
mos á los apóstoles, despues de la venida del Espíritu obispos no vayan á las iglesias que estan fuera de sus
Santo, repartirse entre sí el mundo; su gefe se fija en límites, y que no confundan ni mezclen las iglesias.
Roma, capital del universo, Santiago queda en Jeru Conc. Const., an. 381, can. 2.
salen, San Andrés lleva la fé á la Acaya, San Simon «El papa Bonifacio prohibe á los metropolitanos
á Egipto, San Judas á la Etiopia, Santo Tomás á la ejercer sus funciones en los territorios que no les han
India, y lo mismo todos los demas van á difundir á sido concedidos, y estender su dignidad mas allá de
diversos lugares la luz de la fé. Asi fue como cum— los limites que les son determinados. Ep. ad. Hilar.,
plieron la mision universal que habian recibido: todos episc. Narbon., an. 22.
anuncian la verdad en toda la tierra, anunciándola «El tercer concilio de Cartago prohibe á los obis
cada uno de ellos en una parte del universo. pos usurpar el rebaño de otro é invadir las diócesis
Los obispos que establecieron en pos de si los após de sus colegas. Conc. Carth. III, an. 35, can. 20.
toles, fueron destinados por ellos á territorios parti— «El papa lilario no quiere que se confundan los de
culares. San Pedro fija á San Marcos en Alejandría, rechos de las iglesias, v no permite á un metropoli
San Pablo deja á Timoteo en Eeso y á Tito en Creta. tano ejercer sus facultades en la provincia de otro.
Vemos en el Apocalipsis siete obisposcolocados en sie Ep. al Leon. Veran. et Victur., circa, an 65.
te ciudades ¿ menor. Desde este primer momen «Nunca, dice san Agustin, ejerceremos funciones
lo de la Iglesia, la division de las diócesis ha sido cons en una diócesis agena , á menos que no sean exigidas
tantemente su ley; la tradicion acerca de este punto ó permitidas por el obispo de la diócesis donde nos
no esperimenta ni variacion ni interrupcion. Todos encontremos. Ep. 3, ad Euseb.
los siglos de la Iglesia deponen, contra este principio El segundo concilio de Orleans somete, de confor
fundamental de nuestros adversarios, que la mision midad con los antiguos cánones, todas las iglesias
de los obispos es una mision universal; todos atesti que se construyen, á la jurisdicion del obispo en cu—
guan que jamas tuvieron los obispos semejante mision, yo territorio estan situadas. Conc. Aurel. II, an. 511,
que ha estado en todo tiempo y en todas partes ad can. 17.
merida y concretada á los territorios que la estaban El tercer concilio celebrado en la misma ciudad
asignados. en 538, prohibe á los obispos se lancen en las dióce
«Los cánones apostólicos, que son de la mas remola sis ajenas para ordenar clérigos y consagrar altares.
antiguedad, y que no son otra cosa, serun M. Fleury, El cupable será suspendido de la celebracion de
que las reglas de disciplina dadas por los apóstoles, los sagrados misterios por el término de un año.
conservadas largo tiempo por la simple radicion, y Can. 15.
despues escritas; que gozaban por este título de la El segundo concilio de Orange declara que si un
mas alta consideracion desde el cuarto siglo, prohiben obispo construye una iglesia en una diócesis ajena,
á los obispos que celebren órdenes fuera de sus límites sujeta á la jurisdiccion de aquel en cuyo ter
en las ciudades y en los campos que no les estén su ritorio esté situada. Can. 10.
misos, sin el consentimiento de aquellos de quienes El quinto concilio de Arlés pronuncia que un obis
dependen; y en caso de infraccion, condenan á la po, no podrá elevar á otro grado al clérigo de otro
deposicional obispo que hizo la ordenacion y á los que obispo, sin que conste su permiso por escrito. Can. 7.
la recibieron. Can 36. El concilio de Chalons sobre el Saona contiene la
«San Cipriano dice espresamente que á cada pastor misma prohibicion. Conc. cabil., an. 630, can. 13.
le ha sido asignada una porcion del rebaño para diº “Los capitulares contienen una multitud de dispo—
rigirla. Ep. 55 ad Cornel. -
siciones semejantes. Nos contentaremos con citar una.
«El primer concilio general prohibe á todo obispo Que un obispo tenerario, infractor de los cánones,
hacer ordenaciones en la diócesis de otro, y disponer é inflamado de una odiosa avaricia, no invada las
cosa alguna en una diócesis estraña sin permiso del parroquias del obispo de otra poblacion; y que con
propio obispo. Conc. Nic. 1.”, cap. 38, inter Arab. tento con lo que le pertenece, no arrebate lo que per—
«El concilio de Antioquia prohibe igualmente á los tenece á otro. Capitul. 7, c. 10.
obispos ir á las poblaciones que no les estan sujetas No seguiremos mas allá la cadena de la tradicion;
á hacer órdenes y establecer sacerdotes y diáconos, pasaremos en seguida al concilio de Trento, el cual
sino con el dictámen y voluntad del obispo de aquella confirmó esta ley de todos los siglos de la Iglesia, pro
diócesis. Si alguno se atreve á oponerse á esta decision, hibiendo a todo obispo el ejercicio de las funciones
su ordenacion será nula, y será castigado por el síno episcopales en la diocesis de otro, á no ser con el
do. Conc. Antioch. 1.”, an. 31. can. 22. permiso del obispo de aquel territorio, y sobre los
«El concilio de Sardica contiene una disposicion se súbditos sumisos á este ordinario. Si se falla á esta
mejante. Conc. Sard., an. 37, can. 19. disposicion , el obispo será suspendido del pleno de
«Un concilio de Cartagó celebrado en el mismo siglo recho de sus funciones pontificales, y los que hubie
 - CON 506 CON
ren sido ordenados de este modo, quedarán priva bar unas barreras que la mano del hombre no habia
dos de ejercer su orden. Sess. 6, de reform., cap. 5. puesto. Los obispos pedian por conclusion que se ad
En vista de esta multitud de autoridades podemos mitiese el concurso de la potestad eclesiastica para
inferir que no ha habido tiempo alguno en la Iglesia legitimar todos los cambios que pudieran verificarse;
en que no se haya considerado como universal la mi que se acudiese al papa, sin el cual no se debe tratar
sion dada á los obispos; que, por el contrario, se ha ningun negocio de importancia en la Iglesia; que se
reconocido constantemente y en todas partes desde el autorizara la convocacion de un concilio nacional ó
tiempo de los apóstoles hasta nuestro siglo, como una de concilios provinciales; que no fueran rechazadas
ley positiva, que la mision y la jurisdicion de cada todas las proposiciones del clero; en fin, que no se
obispo estan circunscritas en los límites de la diócesis creyera que era lo mismo tratar acerca de la disci
para la que es consagrado. Luego si esta ley ha esta— pliña de la Iglesia que de la policía de los Estados,
do perpetuamente en vigor en toda la Iglesia desde y que el edificio de Dios no era por su naturaleza pro
los apóstoles, es incontestable que emana de ellos y pio para ser cambiado por el hombre. Ciento diez
que forma parte de las tradiciones apostólicas, las obispos franceses, ó que tenian ciertas eslensiones de
cuales no son otra cosa en sí mismas que la espresion sus diócesis en Francia, se unieron á los treinta obis
de los preceptos recogidos por los apóstoles de boca de os de la asamblea, y la Esposicion de los principios
su divino Maestro. Los apóstoles no habian aun con— ¿ á ser un juicio de toda la Iglesia de Francia.
firmado su gloriosa carrera , y ya el principio de la La Sorbona se unió al episcopado y al esplicarse
division de jurisdiciones y de la separácion de terri acerca de este asunto, trató menos de ilustrar á los
torios entre los obispos que habian instituido estaba autores de la constitucion cismática, que de poner en
reconocido: habia sido, pues, establecido por ellos. guardia á los hombres sencillos y poco instruidos, cu
Tal es, por otra parte, el principio enseñado en todo ya buena fé pudo haber sido sorprendida por estos
tiempo en la Iglesia católica, que hace parte de su declamadores.
doctrina acerca de la autoridad de la tradicion, por Desde que su carta fue conocida del público, los
la cual ha confundido frecuentemente los errores constitucionales, previendo que les seria necesario lu
que se suscitaban en su seno. Todo lo que se recono— char contra la oposicion que iba á presentárles esta
ce universalmente y cuyo origen antiguo se ignora, sana parte del clero, siempre invariablemente adhe
debe atribuirse á la tradicion apostólica. V. Aposró - rida á la inviolabilidad de las leyes y derechos de la
Ll (CO, Iglesia, reclamaron un decreto «que sujetase á los
Es visiblemente opuesta al espíritu del cristianis obispos, á los que antes de ahora eran arzobispos y
m0 la constitucion que proscribe los votos monásticos á los curas que se habian conservado en el ejercicio
lan conformes á los consejos del Evangelio, tan vene— de sus funciones, á que jurasen solemnemente vigilar
rados siempre en la Iglesia, y que se queria, sin em— con esmero sobre los fieles de sus diócesis ó de sus
bargo, hacer ver como contrarios al derecho natural; curas, para que fueran fieles á la nacion , á la ley y
esta constitucion que, bajo pretesto de hacer revivir al rey, que conservarian con todo su poder la cons
la disciplina antigua por medio de una reforma salu— titucion decretada por la asamblea nacional y acep
dable, no hizo mas que introducir el desorden é in— tada por el rey». Todos los sacerdotes que sin haber
novaciones deplorables; esta constitucion que, sin prestado el juramento, continuasen en el ejercicio de
consideracion para con las fundaciones mas respeta sus funciones, debian ser castigados como perturba
bles por su objeto mismo de utilidad, las suprime to— dores del reposo público, perseguidos jurídicamen
das arbitrariamente, con desprecio de las formas canó te y privados del título y de los derechos de ciuda
nicas; esta constitucion, en fin, que estableciendo dano. Luis XVI sancionó tambien este decreto el 26
respecto á las elecciones un modo nuevo y enteramen de diciembre de 1790. En la asamblea nacional, don
te inaudito, las confia indiferentemente á todos los de se hallaban caarenta y siete obispos, treinta y
ciudadanos, fieles, herejes, judios ó idólatras, sin la cinco abates ó canónigos y doscientos ocho curas
menor influencia del mismo clero contra el ejemplo de árrocos y casi selenta eclesiásticos, se sujetaron á
todos los siglos cristianos y de todas las naciónes civi— a constitucion civil del clero. De ciento treinta y
lizadas ó bárbaras. Luis XVI, aunque instruido de qué cinco obispos franceses, cuatro solamente se alista —
modo consideraba la sede apostólica, la constitucion on bajo los eslandartes del cisma; el cardenal de
civil del clero, tuvo la debilidad de sancionar el 2 de Brena, arzobispo de Sens; de Talleyrand, obispo de
agosto de 1790 unos decretos que la Santa Sede no Autun; de Jarente, obispo de Orleans, y de Savi—
aprobaba. nes, obispo de Viviers. Inmediatamente despues de
El 30 de octubre, treinta obispos, dipulados en la la denegacion del juramento por parte de los titula
asamblea nacional, firmaron un escrito que se hizo res fieles, obispos y curas párrocos, las elecciones
célebre, bajo el título de Esposicion de principios acer proveyeron á su reemplazo.
ca de la constitucion civivil del clero. Esta esposicion Mas no era suficiente hacerse elegir por las asam
reclama la jurisdicion esencial á la Iglesia, el derecho bleas; era necesario hallar prelados qué quisiesen dar
de fijar la disciplina, hacer reglamentos, instituir la consagracion episcopal. El obispo de Autun, acom
obispos y darles una mision, derecho que los nuevos pañado de los de Lydda y de Babilonia, se atrevió
decretos la arrebataban por completo. Se quejó de á consagrar el 25 de enero de 1791 á los curas Expi—
que se hubieran suprimido tanlos monasterios; de lly y Marolles por obispos de Finistere y del Aisne;
los decretos que cerraban unos asilos consagra porque despues de la nueva constitucion , los obispos
dos á la piedad; que pretendian anonadar unas pro eran designados, no por el nombre de la poblacion
mesas hechas á Dios, y que se empeñaban en derri— en que se establecian, sino por el del deparlamento
 CON 807 CON
que formaba su diócesis. Y si Talleyrand pudo comu viembre que los eclesiásticos culpables de no haber
ncar á los electos el carácter episcopal, no estaba en prestado juramento cívico á la constitucion serian re
su poder el daria confirmacion y la institucion canó— putados sospechosos de rebelion contra la ley y de
nica, ni conferirles sobre sus departamentos una ju. malas intenciones contra la patria; que serian priva
risdicion que él mismo no tenia. La antigua disci dos de toda pension y sueldo; que finalmente serian
plina, invocada por los defensores de la constitucion confinados en la poblacion que la administracion de
del clero, atribuia el derecho de confirmacion á los partamental señalase para su destierro ó su prision;
metropolitanos ó á los concilios provinciales; y, ni los ¿ Luis XVI puso su veto á este decreto, como tam
unos ni los otros confirmaron los nuevos obispos, ien al del 26 de mayo de 1792, que condenaba á los
quienes carecieron de mision. eclesiásticos no juramentados á la deportacion. Ha—
Asi se consumó el cisma deplorable, por medio del biéndose decretado esta pena por la Convencion el 26
cual se habia querido despedazar la Iglesia, esperan de agosto siguiente contra los sacerdotes que negaron
do que se la hiciese una guerra mas terrible aun. el juramento á la constitucion civil del clero, mas de
Uniéndose á los obispos de Francia para proscribir cincuenta mil proscriptos cubrieron los caminos del
las novedades de la constitucion civil del clero, Pio VI destierro, y los asesinatos comenzaron en todos los
no dejó escusa alguna á los obispos departamentales. puntos de la Francia.
En el Breve de 10 de marzo de 1791, dirigido espe— El 6 de abril anterior, dia mismo del Viernes san
cialmente á los prelados diputados en la asamblea na lo habiendose prohibido por un decreto toda costum
cional, el papa discute muchos artículos de la consti bre eclesiástica y religiosa, dos obispos constitucio—
tucion civil. En el del 13 de abril, dirigido á los obis nales preludiaron, quilándose su cruz, su futura
pos, al clero y á los fieles de Francia, cita con elogio apostasia.
la Esposicion de los treinta prelados, á cuya doctrina Entre diez y siete de los que ocupaban asiento en
llama doctrina de la Iglesia galicana; deplora la de la Convencion, dos solos rehusaron declarar culpable
feccion de los cuatro obispos, sobre todo la del que áLuis XVI; nueve estuvieron por la detencion y cin
habia prestado sus manos para la consagracion de los co por la muerte. Diez y ocho sacerdotes constitucio
constitucionales; declara las elecciones de los nuevos nales entre veinte y cinco votaron tambien la pena
obispos, ilegítimas, sacrílegas y contrarias á los cá capital.
nones, asi como la ereccion de las sillas creadas por Al escándalo de la conducta política, los constitu
las nuevas leyes; pronuncia que las consagraciones cionales añadieron el de las costumbres: muchos de
son criminales, ilícitas y sacrílegas; que los consa sus obispos autorizaron con su ejemplo el matrimonio
grados quedan privados de toda jurisdicion y sus de los religiosos y eclesiásticos apóstatas.
pensos de toda clase de funciones episcopales; manda Se llenó la medida por medio de vergonzosas abju
á todos los eclesiásticos que juraron la constitucion se raciones y la defeccion del clero constitucional; si
retractasen en el término de cuarenta dias, sopena de guiendo las huellas de los enemigos de la religion, se
quedar suspensos del ejercio de todas órdenes y su proscribió el culto en Paris y en los departamentos.
jetos á la irregularidad si ejercian sus funciones sin Véase " FIESTA RE LA RAzoN y “First A DEL SER Su
retractarse del juramento. Asi el juramento por cuyo PREMO).
medio habia pretendido la asamblea ligar los miem Este clero tan complaciente no se libró sin embargo
bros del clero á su nueva constitucion, fué declarado de la persecucion que habia llegado á ser general;
impio por el papa, mas esta clase de obisposó sacerdotes que perecieron
Con el juició de la Santa Sede coincidieron en no fueron inmolados por la causa de la religion: su
Francia los escritos de los obispos ó de eclesiásticos cumbieron víctimas de venganzas particulares, ó en
del segundo orden y aun de muchos jansenistas que vueltos en las pretendidas conspiraciones que inven
minaron esta constitucion, obra de su partido, quie— taba Robespierre.
nes no participaban de todos sus escesos. A estos ata Mas de la mitad de las sillas constitucionales que
ques los constitucionales opusieron vanas respuestas: daron varantes por muerte, apostasia y abandono; el
la principal fue : La Concordancia de los verdaderos cisma por consiguiente locaba á su término, cuando
principios de la Iglesia, de la moral y de la razon, so ciertos espíritus fogosos acometieron la empresa de
bre la constitucion civil del clero, por los obispos de los perpetuarle. No podian resolverse á no ser ya nada,
departamentos, miembros de la asamblea constituyen - despues de haber creido ser en efecto alguna cosa.
te; escrito que un Breve del 19 de marzo de 1792 de - A favor del decreto de 21 de febrero 1795, Sau
claró contener opiniones erróneas, cismáticas y heré rine, Desbois, Gregoire y Royer, obispos de las Lan
ticas, proscriptas y refutadas mucho tiempo antes. das, de la Somme, de Loir y Cher y el del Ain, for—
El 3 de mayo de 1791, los prelados autores de la maron en París, bajo el título de Obispos reunidos, un
Esposicion, respondiendo á la Santa Sede, la ofrecie comité, el cual se invistió de la mision de conservar
ron sus dimisiones, á fin de que pudiera seguir las el cisma. Tal fue el objeto de la encíclica que dirigie
vias mas propias para volver de nuevo la paz; mas ron el 15 de marzo á los demas obispos constitucio
Pio VI no aceptó este sacrificio, entonces inútil, por— nales y á las iglesias vacantes, como el de la impren
que el error hubiera triunfado de él sin reconocerse. la-biblioteca, llamada cristiana, en virtud de la cual
La asamblea legislativa, que sucedió á la constitu reproducian las obras favorables á su partido, y es—
yente, partiendo del principio de que, jurando fide pecialmente la coleccion semanal adornada con el falso
lidad á la constitucion general del Estado, se prometia iítulo de Anales de la religion. El furor de los cismá—
implícitamente conformarse con las disposiciones de ticos se enconaba con las retractaciones que dismi
la constitucion civil del clero, decretó el 29 de no nuian su número. Una segunda encíclica públicada el
 CON ºs (ON
13 de diciembre fue como un nuevo código que se voluntades, hizo cesar las deportaciones. No se pres
ueria sustituir á la constitucion civil del clero, cuyos cribió, tanto respecto á los eclesiásticos como á los
efectos no se disimulaban ya desde el momento en funcionarios, mas que esta fórmula: «Prometo fideli
que fue anonadada; las firmas de los obispos que ha— dad á la constitucion», empeño que algunos creyeron
bian lomado poco tiempo antes el nombre de los de— poder contraer.
partamentos en que se hallaban establecidos, y que El partido constitucional manifestó con escándalo
entonces adoplaban por el contrario el nombre de las su obstinacion en el cisma, moviendo obstáculos en
ciudades en donde residian, defraudaron la esperan punto á las negociaciones relativas al concordato.
za de que se los podria confundir con los prelados á La política de los cismáticos se interesaba en hacer
quienes habian pretendido despojar. Ademas del pe— creer que ellos formaban, la mayor parte del clero;
riódico y la imprenta de donde salian estas provoca que ocupaban casi todas las iglesias; que tenian un
ciones al cisma, se tentó otro medio de alsear la opi episcopado completo: se agitaban, singularmente al
nion, formando bajo el nombre de Sociedad de filoso principio de 1801; tuvieron sínodos y concilios me—
fia cristiana una especie de academia, cuyo objeto tropolitanos, y aun convocaron un concilio nacional.
aparente era defender la religion contra los ataques Si Bonaparte los dejó tener esta asamblea, precisa
de los incrédulos, mas cuyo verdadero objeto era sos mente en la época en que negociaba con la Santa Se—
tener y propagar la Iglesia constitucional. A despe de, fue porque Fouché, el cual protegia á los consti
cho de estos medios las rel raclaciones se multiplicaron. tucionales, le habia persuadido á que los dirigiese, y
Sin embargo, á proporcion que las nuevas eleccio— se sirviera de ellos como de un espantajo, para obli
nes hacian prevalecer á hombres estraños á la re gar á Pio VII á que concediese todo cuanto se queria
volucion, las persecuciones, ejecutadas contra los alcanzar de él. El pretendido concilio se abrio el 29
sacerdotes por haberse negado á prestar juramento de junio, y se separó el 16 de agosto, un mes despues
aparecian mas odiosas. El consejo de los quinientos de ¿? firmado el concordalo.
revocó la ley de deportacion y las demas penas lan El Breve, Post multos labores, con fecha del 15 de
zadas contra los eclesiásticos fieles, á quienes reinte agosto y relativo á los obispos constitucionales, en
gró en sus derechos; y el consejo de los ancianos san cargaba al arzobispo de Corinto, uno de los negocia—
cionó esta resolucion el 2 de agosto de 1797. Pero dores del concordato, que los exhora , á volver
á consecuencía de la reaccion del 18 fructidor, el Di otra vez á la unidad, á someterse al juicio de la Santa
rectorio autorizado para deportar á los sacerdotes usó Sede acerca de los asuntos eclesiásticos de Francia,
sin reserva de esta arma terrible. y á renunciar las sillas que habian ocupado sin la ins
Los reunidos ensayaron por medio de la creacion titucion apostólica. Comprimidos por el temor que
de presbíteros, y la celebracion de sinodos, un falso inspiraba Bonaparte, los constitucionales, que eran
concilio, el cual se abrió el 15 de agosto de 1797. entonces en número de 59, de los cuales 30 fueron
Gregoire, que era el alma de esta asamblea, como electos en virtud de la constitucion civil del clero y
igualmente de todo su partido, le presentó, acerca de 29 en virtud de las formas arbitrarias, hicieron su
los trabajos de los obispos reunidos, una reseña mas acla de dimision en manos del gobierno, á escepcion
digna de figurar en los registros de un club que en de Sabines, obispo de la Ardecha. Algunos publica—
las actas de un concilio. El 2 de setiembre se de— ron unas aclas particulares en esta ocasion, y Gre—
cretó un plan de pacificacion con el clero ortodoxo; goire, entre otros, pretendió haber subido á la silla de
por una estravagante contradiccion, se declaró aun que hacia dimision, sin ninguna oposicion canonica;
que no se podia tratar ni con los obispos que estaban como si los Breves de Pio VI en 1791 y 1792, como si
fuera de Francia, ni con los que habian permanecido las reclamaciones de los obispos despojados, de los
en el reino, no habiendo prestado los juramentos cabildos y del clero, como si tantos escritos contra las
exigidos; restriccion que hacia derisoria la oferta innovaciones, no fuesen canónicos y pudieran consi
anunciada por los constitucionales de ceder el puesto derarse como nulos
al obispo antiguo en los sitios donde no existiese algu Cuando se trató de proveer las sillas recientemente
no. Despues de haber escrito á Pio VI, el falso concilio instituidas, fueron designados 18 antiguos arzobispos
se separó el 12 de noviembre. Este conciliábulo pre ú obispos, y por una ¿ fatal se escogió
sentado por unos como una imágen fiel del concilio de tambien á 12 constitucionales haciéndo Fouché pre
Nicea, fue escarnecido por los demas, quienes le valecer la opinion de que el mejor medio de estinguir
echarón en cara el no haberse atrevido á tomar una las divisiones era el de refundir los dos partidos. Las
determinacion en favor del matrimonio de los sacer instrucciones del legado Caprara contenían que no se
admitiese á los constitucionales sino en virtud de
dotes y del uso de la lengua vulgar en los oficios.
Véase” lo Esia CAtólica FRANcEsA). El aso concilio pruebas de su sumision á los juicios del papa; mas re
abia exhortado vivamente á nombrar obispos en to conociéndose apoyados por Fouché y contando con
das partes cuyas sillas se hallaban vacantes; tambien la debilidad de Caprara, se negaron á firmar la carta
habia erigido sillas aun para las colonias, sin consul que este último les presentó. Bernier, uno de los ne—
tar ni á los habitantes, ni á los que gozaban de juris gociadores franceses del concordato, propuso enton
dicion en aquellos paises. - •
ces al legado suscribiera él mismo una declaracion
Manviel, secretario de los reunidos, electo obispo de que no dejase duda alguna acerca de la vuelta de los
cayes y cónsagrado en 1800, se marchó á Santo Do constitucionales á la unidad católica, y que la pusiera
mingo donde no consiguió acredilar el cisma constitu al abrigo de las reprensiones de la Santa Sede. Ha
cional. Entonces el 18 brumario acababa de derribar biendo Caprara aceptado esta oferta, hizo firmar á los
cismáticos obstinados una fórmula concebida en tér
al Directorio; y Bonaparte, que queria grangearse las
 CON 1509) CON

minos generales; despues se atrevió á declarar por cunstancia favorable para resucitar el cisma, y enta
escrito que los habia remitido el decreto de absolu bló negociaciones con el duque de Orleans, á quien
cion del legado, el cual habia sido recibido con el de esta revolucion acababa de hacer rey; mas la inter
bido respeto. En virtud de esta afirmacion, los cons vencion de Mr. de Quelen, arzobispo de Paris, las
titucionales alcanzaron sus bulas de institucion canó desbarató felizmente. Gregoire murió en 1831 sin ha
nica. Pio VIl debió creer que todo habia sucedido ber visto realizarse su desvarío, y sin haber salido,
como lo apetecia; mas el secreto se divulgó bien pron aun en presencia de la tumba, de su deplorable ce
to por muchos obispos constitucionales, los cuales se guedad.
jactaron públicamente de no haberse retractado, y Consultores. Se dá en Roma este nombre á
cuyo ejemplo alentó la resistencia de los sacerdotes
cismáticos esparcidos en los departamentos. Sin em los teólogos por el soberano Pontífice pa
bargo, algunos prelados se separaron sucesivamente ra examinar los libros y proposiciones denunciadas á
del partido, y no quedó mas que un pequeño número su tribunal, y dan cuenta de ellas en las congrega
de obispos endurecidos en su oposicion á los juicios ciones, en las que no tienen voto deliberativo. Llá
de la Santa Sede. manse asi en algunas Ordenes monásticas los religio
Estos prelados quisieron á todo precio asistir á la sos encargados de informar al general, y son como
consagracion del emperador, sin haber cumplido las su consejo.
condiciones que el papa habia estimulado sobre esto. Consustanelacuon. Término por el que es
A estas palabras conservadas en una fórmula trazada presan luteranos su creencia acerca de la presencia
por el cárdenal Fesch y el ministro Portalis: «Sumi real delosJesucristo en la Eucaristia. Pretenden que
sion á sus juicios acerca de los asuntos eclesiásticos despues de la consagracion, el cuerpo y la sangre de
de Francia;» el contumaz Le Coz, arzobispo de Be— Jesucristo estan realmente presentes con la suslancia
sanzen, sustituyó estas otras: «Acerca de los asun del pan sin que esta sea destruida. Lo que se llama
tos canónicos de Francia.» Pio VII, viendo que en tambien empanacion.
realidad nada se habia alcanzado de los refractarios
Decia Lutero: «Creo con Wiclef que permanece
obstinados, invitó á Napoleon á tomar las medidas el pan, y creo con los sofistas que está allí el cuerpo
necesarias para que el gele de la Iglesia no se encon de Jesucristo.» L. de Captiv. Babyl, t. 2.
trase comprometido, y para que nada pudiera turbar Tan pronto pretendia que el cuerpo de Jesucristo
y mancillar la ceremonia de la consagracion. está con el pan, como el fuego con el hierro ar—
Los obispos constitucionales recibieron despues la diendo; y tan pronto que está en el pan y bajo el pan,
orden muy terminante de acceder á los deseos del como el vino está en y bajo el tonel; in, sub, cum,
soberano Pontífice, suscribiendo la fórmula siguiente: Pero conoció que estas palabras hoc est corpus meum
«Santísimo Padre, no vacilo en declarar á W. S. que
significan alguna cosa mas, las esplicó asi: este pan
desde la institucion canónica entregada por el carde es sustancialmente mi cuerpo; esplicacion inaudita y
nal legado, me he adherido de corazon y de entendi— mas absurda que la primera.
miento al gran principio de la unidad católica, y que Zuinglio y los defensores del sentido figurado de
todo cuanto se me hubiere supuesto ó haya podido muestran claramente á Lutero que violentaba las pa
deslizárseme en contra de este principio, no ha en labras de Jesucristo. En efecto, este divino Salvador
trado nunca en mis intenciones, habiendo tenido no dijo: mi cuerpo está aqui, ó mi cuerpo está bajo
siempre por máxima el vivir y morir católico, y por esto y con esto ó esto contiene mi cuerpo: sino este
tanto profesar los principios de esta santa religion. es mi cuerpo. Lo que quiere dar á los fieles no es
Afirmó que estoy dispuesto á dar mi vida por ense pues, una sustancia que contiene su cuerpo ó le
ñarla é inspirársela á todos los calólicos. Asi, declaro acompaña, sino su cuerpo sin ninguna sustancia es
ante Dios que profeso adhesion y sumision á los jui traña. Tampoco dice: este pan es mi cuerpo: sino este
cios de la Santa Sede acerca de los negocios eclesiás es mi cuerpo, por medio de un término indefinido
ticos de Francia.» Los refractarios obedecieron, si
para manifestar que lo que dá no es ya pan sino su
muchos parecieron volver despues sobre esta conduc cuerpo.
ta, estas variaciones no se deben considerar sino como Puede decirse con la Iglesia católica que el pan
hechos aislados. - -

se hace el cuerpo de Jesucristo, en el mismo sentido

A estas retractaciones es preciso añadir las de que el agua se hizo vino en las bodas de Caná, cam
muchos obispos cismáticos ¿ no habian sido pro biándose una en otro. Se puede decir que lo que es
movidos á ocupar nuevas sillas despues del concor pan en apariencia es realmente el cuerpo de Nues
dato, y que repararon con mas ó menos claridad su tro Señor; pero que el pan permaneciendo tal, fue
conducta pasada. Numerosos ejemplos de vuelta á la se al mismo tiempo el cuerpo de Jesucristo, como pre
unidad tuvieron lugar entre los sacerdotes constitu lendia Lutero, es una cosa que no tiene sentido,
cionales en la época de este concordato. La mayor De donde se concluia contra él, ó que es necesario
parte de aquellos que no los habian aun imitado se admitir, como los católicos, un cambio de sustancia,
rindieron por fin despues de la restauracion. Queda ó que es preciso atenerse al sentido figurado, y no
ron á la verdad en diferentes diócesis algunos sacer suponer mas que un cambio moral. Véase la Historia
dotes afectos á los principios, bajo los cuales la cons de las Variaciones, l. 1, l. 2.
titucion civil del clero se habia establecido; pero no Parece que en el dia no sostienen ya los luteranos
formaron cuerpo y estaban sumisos esteriormente á la consustanciacion; creen en general que Jesucristo
los obispos. está presente en la Eucaristía, solo en el uso o en la
La revolucion de 1830 pareció á Gregoire una cir accion de recibirlo. V. LUTERANos.
TOMO I, 70
 CON 510) CON

Consustaneadores. Pretende Pelisson que Por su parte dicen los incrédulos que se ha trasfor
los arrianos despues del concilio de Nicea dieron, á nado el universo por una palabra, por una cuestion
los católicos que sostenian la consustancialidad del gramatical; pero esta palabra contenia un dogma fun
Verho el nombre de consustanciadores; pero no es na damental del cristianismo. Si este dogma era falso,
tural esta derivacionó traduccion de la palabra homou seria necesario deducir que la verdadera doctrina de
sianos. Jesucristo ha sido desconocida desde el año 269, y que
Los teólogos católicos son los que han llamado con desde esta época el cristianismo es una religion falsa.
sustanciadores á los luteranos que admiten la consus Si la consustancialidad del Verbo era una doctri
tanciacion en la Eucaristia. -
na nueva ¿por qué los arrianos no han podido nunca
ponerse de acuerdo? Los arrianos puros ó otinianos
Consustancial. Lo que es de la misma sus— enseñaban sin rodeo, como Arrio, que el Hijo de Dios
tancia y de la misma esencia; es la traduccion del era desemejante á su Padre, que era una pura cria
decian que
griego oMooUsos, de que se valio el concilio de Nicea tura sacada de la nada. Los semi-arrianos
para decidir la divinidad del Verbo. era semejante al Padro en naturaleza y en ¿
En el siglo I fue atacada la divinidad de Jesucristo cosas; algunes confesaban que era Dios. ¿Porqué estas
disputas, estas condenaciones mútuas, esta oposicion
por los ebionilas, y por los cerintios; en el II por los entre las díferentes sectas de los arrianos? Hubiera
teodocianos; en el III por los artemonianos, y despues
por los samosatienos, ó por los samosatenianos, se sido mas breve para ellos el convenir en una cosa y
cuaces de Pablo de Samosata. En el año 269 se reu esplicarse todos como Arrio, y como lo hacen en el dia
nió un concilio en Antioquia para establecer este dog los socinianos. Pere se conocialaque, para suceder esto,
ma; fueron depuestos ¿ y el obispo de Antioquia era necesario contradecir ásiglos;
Escritura y á la tra—
que pensaba como él. Pero este concilio en su decreto dicion de los tres primeros se trataba de paliar
no usó de la palabra consustancial; los PP. temieron el error para que lo adoptasen los fieles
con menos
no se abusase de ella para confundir las personas, ó repugnancia.
El Patriarca de Alejandria lo hizo ya observar en
para suponer que el Padre y el lijo habian sido for la carta que escribió á los obispos antes del concilio
mados de una misma materia preecsistente. Esta es la
razon que dá S. Alanasio. de Nicea, para darles noticia de la condenacion que
En el año 325, cuando los arrianos negaron de habia hecho de Arrio y sus secuaces. V. Sócrates,
nuevo la divinidad de Jesucristo, el concilio general Historia Eclesiástica, l. 1, c. 6.
de Nicea juzgó que no habia que temer el abuso de Entre los protestantes, muchos de los que se incli
esta palabra, y que no habia ninguna otra mas propia naban al socinianismo han sostenido que los PP. de
para prevenir los equívocos y los subterfugios de los Nicea, estableciendo que el Ilijo de Dios es consustan.-
arrianos; por consiguiente decidió que el Ilijo de Dios cial al Padre, entendian solamente que la natu—
es consustancial á su Padre, y asi lo espresó en el raleza divina es perfeclamente semejante é igual en
símbolo, que aun hoy dia se recita en la misa. estas dos personas, pero que no se halla en ellas
Los arrianos hicieron mucho ruido porque se con— numéricamente una y singular. Cudvcorth, Sist. in
sagró en el concitio de Nicea una palabra que se ha tell., t. 1, c., S.36, pretende que este último senti
do no se encuentra en los autores cristianos antes del
bia desechado por los PP. del de Antioquia, la in cuarto concilio de Letran, celebrado el año 1215,
terpretaron maliciosamente en el sentido que habian
querido evitar estos PP. Redactaron sucesivamente que lo estableció asi contra el abad Joaquin. Los PP.
veinte formulas de fé, en las que declaraban que el dice, han repetido muchas veces que la naturaleza
Ilijo de Dios era semejante al Padre en todas las cosas, divinaes una en las tres personas de la Santísima Tri
que segun las Escrituras le es semejante, que es Dios nidad, como la humanidad es una en tres hombres;
etc. Protestaban que si querian suprimir la palabra hablan pues de una unidad de especie, no de una
consustancial, que no habria mas disputas ni divisio— unidad de número. Procura probarlo con muchos
pasajes de los PP.: Le Clerc era de la misma opi
nes. El emperador Constancio, su protector, empleó nion,
loda clase de violencias para obligar á los obispos á y Mosheim en sus notas sobre Cudvvorth no se
que la suprimieran. ha lomado el trabajo de refutarla. De lo que debemos
Pero los ortodoxos no cedieron: comprendieron que deducir que, segun estos crílicos, los PP, que con
los arrianos procedian de mala é, que desechaban la tanto celo han defendido la consustancialidad del
palabra para destruir el dogma; miraban como cap— Verbo, no eran en el fondo mas ortodoxos en cuanto
ciosas todas las formulas en las que la palabra consus á este misterio que los arrianos.
tancial se habia suprimido. Pero, 1." Estós Padres que demuestran por otro la
En el dia renuevan los socinianos los clamores de do tanta penetracion y sagacidad, han podido ser tan
los arrianos; dicen que el concilio de Nicea ha inno estúpidos que comparen rigorosamente la naturaleza
vado la doctrina, que ha establecido un dogma des divina con la humana, la unidad real de la primera
conocido hasta entonces, puesto que ha usado una pa con la unidad impropiamente dicha de la segunda,
labra, que el concilio de Antioquia habia desechado que no es mas que una abstraccion? Se hubieran visto
cincuenia y tres años antes. Se les ha probado con precisados á confesar que, asi como tres personas hu
testimonios espresos de los PP. de los tres primeros manas son tres hombres, las tres personas divinas
siglos que se habia decidido en Antioquia el mismo son tres dioses. Este es el argumento que les hacian
dogma que en Nicea; que los arrianos no hacian mas los sabelianos, y contra el que se han defendido los
que repetir el error condenado en Pablo de Samosata PP. 2." Aun hay mas; los PP. han dicho que la
y sus secuaces. generacion del ilijo de Dios está fuera de todo
 CON 511) CON

ejemplo y comparacion; luego no han considerado los demas misterios. Beausobre, Historia del mani
las comparaciones que han hecho como esactas y queismo, t. 1, l. 3, c. 6.
rigorosas. Euseb. ado. Marcell. Ancir., l. 1, p. 73,
etc. 3." Enseñaron que la unidad de la naturaleza Consustancial dad. V. CoNsUSTaNCIAL.
divina en las tres personas es un misterio; y cierta
mente que la unidad específica de la naturaleza hu Contenemplacion. Segun los místicos, es una
mana en los diversos individuos no es un misterio; mirada sencilla y afectuosa hácia Dios, como presen
luego los PP. no han creido que estas dos unidades te en nuestra alma. La contemplacion, dicen, consis
son una misma cosa....º Han asegurado constante— te en actos tan sencillos, tan directos, tan uniformes,
mente que la naturaleza divina es indicisa en las tres tan apacibles, que no tienen nada por donde se les
personas, en consecuencia, que las tres son un solo pueda tomar para distinguirlos.
Dios; pero ninguno se acordó de decir que la natu En el estado contemplativo, el alma debe estar en—
aleza humana es indivisa en tres hombres, y que teramente pasiva con respecto á Dios; debe estar en
los tres son un solo hombre. 5 º Cudworth insiste en un reposo contínuo, libre de la turbacion de las al—
que, diciendo que la naturaleza divina es una, no hanmas inquietas, que se agitan para sentir sus opera
añadido los PP. que es singular; pero los desafiamos ciones; esta es una oracion de silencio y de quietud.
á que busquen en la lengua griega un término que No es, añaden, un rapto, una suspension estática
corresponda esactamente á la palabra sinqularis de de todas las facultades del alma, sino un estado pa
los latinos. Cuando han dicho que es una é indirisa, sivo, una paz profunda, que deja al alma perfecta—
no creyeron que esto se pudiera entender solamente mente dispuesta á ser movida por las impresiones de
de una unidad específica, porque esta lleva en sí la la gracia, y en el estado mas á propósito para seguir
division. 6.º Cuando los arrianos han puesto en sus sus movimientos.
profesiones de fé que el Hijo de Dios esperfectamente Las personas encargadas de dirigir á los contem
Semejante á su Padre en naturaleza, en sustancia y plativos es necesario que tengan mucha prudencia
en todas las cosas, los PP. han desechado estas es para conocer el espíritu de Dios y distinguirlo de las
Presiones como insuficientes; ellas contenian, sin ilusiones del amor propio.
embargo, la unidad específica de la naturaleza; luego
Por la palabra consustancial, entendian alguna cosa Contesto. Palabra usada entre los teólogos y
mas, es decir, la unidad numérica y singular. 7.º que tiene muchos sentidos. Muchas veces significa
Lºs arrianos no querian admitir generacion en Dios: simplemente el testo de la Sagrada Escritura ó de un
toda generacion, decian, se hace ó por el despren— autor cualquiera. Ordinariamente significa lo que
dimiento de alguna parte que se separa de todo, ó precede ó lo que sigue á un pasaje, ó designa, cual
por la estension ó dilatacion de la sustancia que en— quiera otro lugar con el que tenga relacion; en este
gendra; y la sustancia divina no puede dilatarse, en sentido se dice, que, para enlender bien el testo, es
cogerse, ni dividirse. Los PP. suponian que Dios en necesario consultar el contesto.
gendra de su propia sustancia á su Hijo único: pero
sindivision . sin cambio, sin alteracion, sin despren Continencia. Estado de los que han renun
dimiento, sin esperimentar nada de lo que sucede en ciado al matrimonio. Jesucristo nos ha dado estimo —
las generaciones animales. S. Hil., l. 3, de Trinit., nio del aprecio que hace de él, cuando dijo que hubo
l. 8.; L. de Synodis, n. 17 y 4, etc. Luego ellos han
eunucos que renunciaron al matrimonio por el reino
admitido entre el Padre y el Hijo una unidad numé. de los cielos; que no todos lo comprenden, sino aque
rica de naturaleza, y no simplemente una unidad llos que han recibido el don acerca de esto. Matthei,
específica, tal como se verifica entre un hombre y c. 19, y. 11 y 12. En el artíulo CElub Ato hemos ci—
su hijo. tado las palabras de S. Pablo. No ha habido subter
Se pregunta: ¿pero por qué querer esplicar lo que fugios que no se hayan empleado para torcer el sen
es inesplicable? ¿Por qué no limitarse á decir, como tido de estos pasajes.
los autores sagrados, que Jesucristo es el Hijo de Nuestros ¿ en union con los protestantes,
Dios, sin entrometerse á decir cómo lo es? Decimos sostienen que la continencia no es apreciable por sí
que no, era posible contentarse con esto, y que los misma, y que no llega á serlo sino en cuanto condu
PP. se han visto obligados á dar una esplicacion. 1.º ce accidentalmente á la práctica de alguna virtud, ó
Es necesario tener alguna idea de un dogma, que se á la ejecucion de algun designio generoso: que fuera
cree y que se profesa, porque la fé no tiene por ob de estos casos, mas bien merece reprension que
jeto las palabras sino las cosas significadas por las elogios.
palabras. 2. Esta proposicion: Jesucristo es el Hijo Nos parece que el nombre virtud significa la fuer
de Dios, podia tener diferentes sentidos, y los herejes za del alma, que tiene necesidad de ella para resistir
es daban muchos sentidos falsos; era necesario, pués, á una inclinacion imperiosa, tal como el deseo de los
fijar el verdadero, y escluir el falso. 3.º El decirá placeres sensuales; que este valor es siempre apre
los paganos que Jesucristo es Hijo de Dios, era dar— ciable por sí mismo, á menos que no vaya inicio
les ocasion para preguntar por qué los cristianos no nado por un motivo malo.
admiten las genealogias de los dioses, mientras que Sin duda que hay hombres que renuncian al ma
ellos mismos enseñan que Dios tiene un hijo. Esta trimonio por motivos reprensibles, y que viven en el
han, pues, obligados á manifestar á los paganos la celibato sin guardar la continencia: con bastante fre
diferencia que habia entre la teología cristiana y las son estos los que quieren desacreditar dicha
fábulas de la mitología; lo mismo sucede con todos virtud.
 CON CON
512
Cualquiera, se dice, que se halla conformado de Contradiccion. Losincrédulos, con el designio
modo que ¿ procrear á un semejante, tiene el
derecho de hacerlo, esto es, el derecho ó la voz de la
de probar que nuestros libros santos nada menos son
que obras divinas, se han dedicado á buscar en ellos
naturaleza; sea asi, pero el hombre puede renunciar contradicciones, y se han lisonjeado con haberlas ha
á su derecho sin violar ley alguna; y cuando lo hace llado en gran número. Pero valiéndonos de su méto
por un motivo laudable, es un acto de virtud. Aquel do no hay ninguna historia, ni ningun libro en el
ue, sin perjudicar á su salud ni á sus deberes, pue que no sea fácil hallarlas en mayor número.
e beber y comer mas que otros, tambien tiene este Si uno de los cuatro evangelistas refiere un he
derecho; pero ¿será reprensible si se abstiene de cho ó una circunstancia, de la que los otros no han
ello por temperancia, ó con el fin de tener sobrante hablado, nuestros sútiles críticos dicen que está en
para dar á los pobres ? contradiccion con ellos, como si el silencio de un his
Se añade que no hay ninguna razon que obligue á toriador fuese lo mismo que una reclamacion ú opo
una continencia perpélua, que cuando mas los hay sicion espresa; ninguno de los evangelistas se pro
¿ la hacen necesaria por cierto tiempo. Pero el dichopuso escribir esactamente todo lo que Jesucristo ha
esignio generoso de consagrarse al culto de Dios y á y hecho, ni guardar escrupulosamente el
la salvacion de los hombres no es una buena razon orden de los sucesos, sino solamente un cono
dar
para abrazar la continencia perpétua? Es necesario cimiento suficiente á los fieles para establecer su fé.
emplear los primeros años de la vida en hacerse ca Los Evangelios, dice un célebre incrédulo, nos han
paces de ella, y consumir el resto en los trabajos uni sido dados para enseñarnos á vivir santamente, no
dos á esta funcion caritativa. para criticar sábiamente. Es sensible que él mismo
No vemos que los hombres casados y llenos de fa haya olvidado muchas veces esta sábia reflecsion.
Cuando dos ó mas autores contemporáneos han
milia abandonan sus hogares para llevar la luz del escrito una misma historia, han hablado de un
Evangelio á las estremidades del mundo, para ir á acontecimiento lleno de circunstancias ¿ha sucedido
rescalar los cautivos y consolar á los esclavos entre nunca que lo hayan referido precisamente lo mismo,
los infieles, para desempeñar las funciones de los ig sin ninguna variacion ?, En este caso se pensaria
norantines y de los hermanos de la caridad? Sin el
aprecio que la religion católica inspira hácia el esta— que el uno habia copiado al otro, ó que habian
usado de colusion. Los que han querido componer
do de continencia y, de virginidad ¿se encontrarian un cuerpo completo de historia romana, se han vis
hermanas para cuidar los hospitales, para aliviará to obligados á reunir comparar juntos,
los enfermos, para educar los espósitos y los huérfa antiguos y todos los
nos, para instruir a los pobres, para tener casas de historiadores, y suplir el silencio de uno
educacion, recoger los penitentes y sacarlos del des— con la narracion de otro; y cuando han creido ver en
orden, etc.? Los que aspiran al matrimonio no se con ellos alguna oposicion, han buscado el medio de
sagran á estas funciones penosas; asi estas buenas conciliarlos; no vemos que los incrédulos hayan re
obras estan muy descuidadas en las comuniones pro rendido esta conducta. Hé aqui tambien lo que se
¿ buscando la concordia ó la armonia de los cua
testantes; la caridad heróica no ha sobrevivido en
tro Evangelios; asi la narracion se ha hecho mas se
ellas á la continencia. Por mas que se asalarien per guida y mas fácil de entender, y se ve que no hay
sonas de ambos sexos, el dinero no hará nunca lo
que hace la religion! Y lnego se nos dice friamente en ella ninguna contradiccion. Tambien ha sido ne
que la continencia no sirve para nada, que es una cesario comparar los libros de los Reyes con los de
los Paralipómenos, que refieren los mismos hechos,
virtud de la que nada resulta
aunque con algunas variaciones; ha sido necesario,
No conviene llamar instituciones humanas lo que en fin, comparar uno con otro los dos libros de los
ha sido instituido, alabado, consagrado y practicado Macabeos, cuyos autores no han seguido esacta
por Jesucristo. Cuando nuestros filósofos disertan so— mente el orden cronológico. Pero luego que se trata
bre las virtudes y los vicios, deberían acordarse que de los escritores sagrados, los incrédulos no quieren
las nociones bebidas en el Evangelio valen mas que ya conciliacion; no tratan de saber la verdad, sino
las que ellos toman de la filosofía pagana. de oscurecerla lo que puedan.
Se dice que los PP. han hecho demasiados elogios Una circunstancia sola que se omita y que pa
de la continencia, que la han apreciado y alabado recia municiosa al que escribió, bastará con el tiem
hasta el esceso; No son mas bien sus censores los que po para esparcir la oscuridad y embarazo en su nar
llevan hasta el esceso la indiferencia y el desprecio racion, parecerá contradictoria á los que la lean sin
de esta virtud? Cuando se sabe hasta qué punto era estar suficientemente instruidos en lo que pasaba en
llevada la impudicicia entre los paganos, se compren tonces. En el tiempo en que los evangelistas escri
de que este desorden no podia reformarse, sino por bieron, este inconveniente no tenía lugar, porque
una moral muy severa, y elogiando mucho mas la lo hacian de hechos públicos cuya memoria estaba
virtud opuesta; no hay que admirarse del lenguaje todavia reciente. No sucede lo mismo despues de un
de los PP., que es el de la Sagrada Escritura. Les gran número de siglos: nosotros no conocemos bas
parecia hermoso poder decir del cristianismo lo que tante las costumbres, los usos, los hábitos, el len
Tito-Livio puso en boca de un antiguo romano: Et guaje de los habitantes de la Judea, su estado civil
facere et pati fortia christianum est. V. CELIBAro, y político, la disposicion de su espíritu, la situa—
CASTIDAD, VIRGINIDAD.
cion de los lugares, etc. Esto, que era demasiado cla
Contobardistas, V. EUTIQUIANos.
ro para ellos, se ha hecho oscuro para nosotros.
Los comentadores de la Sagrada Escritura no
 CON 513 CON

han pasado en silencio ninguna de las pretendidas ner la creencia y la práctica constante de la Iglesia
contradicciones de que hacen alarde los incrédulos, atestiguadas por los PP. y fundadas en estos mismos
en los escritos de los santos es donde con frecuen ejemplos. El concilio de Trento ha condenado justa
cia han ido nuestros sabios críticos á tomarlas, de mente este error de Lutero en la sess. 14, can. 5.
jando á un lado las aclaraciones y las respuestas; Cómo este sectario ha podido sostener que el temor
en seguida se han copiado unos á otros, y trasmi de las penas eternas y la contricion no servian mas
lídose sus argumentos por tradicion. Las ecsamina ue á hacer al hombre hipócrita y mas grande peca
remos en particular en los artículos que tengan re or? (Isaias c. 57, y.15), dice: «que Dios habita con los
lacion con ellas, y haremos ver que la narracion de que tienen el espíritu humilde y contrito , y que les
los escritores sagrados no se contradice. da la vida.... Sobre quién echaré la vista, dice el
Tambien muchas veces se ha echado en cara á Señor, sino sobre el pobre que tiene el espíritu con
los teólogos el espíritu de contradiccion, el amor á la trito y tiembla á mi palabra?» (c. 66, y. 2); Jesucristo
disputa, la prontitud con que se acaloran en todo lo se aplica estas palabras: «el Señor me ha enviado
¿ choque con sus opiniones. Convenimos que este para sanar los corazones contritos, y dar libertad á
efecto, si es que lo es, es el patrimonio universal los cautivos». (Luc., c., y, 18). Despues de la pri
de la humanidad: no reina menos entre los que cul mera predicacion de S. Pedro, los judios fueron mo
tivan las demas ciencias, y los que se quejan de es— vidos al arrepentimiento, compuncti sunt corde, y
lo se ven muchas veces acometidos de él sin cono preguntaron ¿Qué haremos? Haced penitencia, res
cerlo. Pero en esto los teólogos quizá sean los menos pondió el Apóstol, y recibid el bautismo. (Act º, 2,
reprensibles. La necesidad de velar de cerca sobre y. 37). Esto no era ni hipocresia, ni aumento del pe
todo lo que pueda atacar á las verdades reveladas; cado. Para que sea eficaz la contricion debe ser sin
la multitud de errores que han turbado á la Iglesia, cera, libre, sobrenatural, viva y vehemente. Sincera,
la facilidad con que se aprovecha la ocasion de com porque Dios exige el dolor del corazon; libre, no for
batir á la religion deben hacer muy cuidadosos á zada ni arrancada por el temor y los remordimien
los que estan encargados de defenderla. No se debe, tos; sobrenatural, no solo en su principio, que es
pues, condenar su esactitud en hacer patentes las la gracia, sin la que no nos podemos arrepentir sin
faltas mas ligeras: saben por una larga esperiencia, ceramente, sino en su motivo, y debe tener á Dios
que la chispa mas pequeña puede producir un in por obieto. Consiguientemente, la asamblea del clero
cendio. de Francia, en 1700, condenó como herética la pro
posicion de algunos casuistas, que decian que la
Contra-remontrantes ó Gomaristas. atricion concebida por un motivo natural, con tal
V. ARMINIANos. que fuese honesto, hastaba en el sacramento de la
Contrato Social. V. SoCIEDAD.
penitencia. -

En fin, la contricion debe ser viva, vehemente ó

soberana; un corazon verdaderamente penitente debe
Contrielon. Pesar de haber pecado. Esta pa hallarse en disposicion de preferir á Dios á todas las
labra derivada de conterere, quebrantar, romper, es cosas, de morir, si es necesario, antes de ofender
presa el estado de un alma ¿ y penetrada le; dirigirse á Dios tan vivamente, como él detesta
por el dolor de haber ofendido á Dios, que desea el pecado; aborrecer todos los pecados sin escepcion.
con ardor reconciliarse con él, y recobrar la gracia. Los teólogos distinguen dos clases de contricion:
Se ha tomado de la Escritura santa; (Joel, c. 11). una perfecta y otra imperfecta, que se llama atri
y. 13, decia á los judios: Rasgad vuestros corazones y cion. La primera es la que tiene por motivo el amor
no vuestros vestidos: y David (ps. 50); No desprecia. de Dios, ó la caridad propiamente dicha; reconcilia
rás, Señor, un corazon contrito y humillado. al pecador con Dios antes de la recepcion del sacra
El concilio de Trento (sess. 14, c.), definió la mento de la penitencia , pero debe siempre contener
contricion, un dolor del alma y un aborrecimiento el deseo y la voluntad de recibirlo. Asi se espresa el
del pecado cometido, con propósito de no pecar ja concilio de Trento, (sess. 1, can. ). La segunda, se
mas; declara que esta contricion ha sido siempre ne gun el mismo concilio, es el dolor ó la detestacion
cesaria para alcanzar la remision de los pecados. del pecado, concebida por la consideracion de la feal
Esto se halla probado con los ejemplos de David dad del pecado, y por el temor de las penas del in
penitente, de los ninivitas, de Achab, de Manassés, y fierno. Declara, que si escluye la voluntad de pecar
de la pecadora de Naim, etc. y contiene la esperanza del perdon; no solo no hace
En la ley evangélica la contricion ecsige ademas al hombre hipócrita y mayor pecador, sino que lo
el deseo de ejecutar todo lo que Jesucristo ha orde dispone á alcanzar la gracia de Dios en el sacramen
nado para la remision de los pecados, por consiguien to de la penitencia. Establece que esta atricion es un
te, la voluntad de confesarlos y satisfacer á la justicia don de Dios y un movimiento del Espíritu Santo,
divina; asi los teólogos con santo Tomás definen la que no habita todavia en el alma del penitente, pero
contricion un dolor del pecado acompañado del pro que lo escita á convertirse; que no le justifica por sí
pósito de confesarlo y satisfacerlo. sola sin el sacramento, pero que sirve de disposicion
Lutero se ha separado mucho de estas nociones, para él. -- “.

cuando ha reducido toda la penitencia al cambio de Sobre esta decision del concilio disputan los teólo
vida, sin ecsigir ningun pesar de lo pasado, ni con gos para saber en qué consiste precisamente la dife
fesion del pecado. Ademas de los ejemplos en con rencia entre la contricion perfecta y la atricion. Unos
trario que vemos en la Escritura, se le podia opo quieren que el motivo de una y de otra sea absoluta
 CON 514) CON
mente el mismo, á saber, el amor de Dios; que toda la dado mas que en un razonamiento absurdo. Si para
diferencia consiste en que este amor es mas vivo en alcanzar el perdon de nuestras culpas, decian, es
la contricion perfecta, y mas débil en la atricion. preciso amar á Dios absolutamente, ¿qué ventaja te—
Otros sostienen que el motivo de la atriciones dife nemos sobre los judios? ¿De qué sirve el sacramento
rente; que este es, segun el concilio, la fealdad del de la penitencia si no suple al defecto del amor, y no
pecado, el temor del infierno , la esperanza del per nos descarga de la penosa obligacion de amar á b¿
don; que todo dolor del pecado concebido por moli actualmente?
vo de amor de Dios, por débil que sea, es la contri No agrada á Dios que la obligacion de amarle pue
cion perfecta. da ¿ penosa á un cristiano, ó que el privilegio
En consecuencia, los primeros pretenden que solo de la nueva ley sobre la antigua sea la dispensa de
la atricion no basta en el sacramento de la peniten amar á Dios. La diferencia entre estas dos leyes, se
cia; se fundan en lo que el concilio de Trenlo, ha gun S. Pablo, es que la antigna era una ley de temor
blando de la justificacion, exige, como una disposi y la nueva una ley de amor. Un cristiano que recibe
cion esencial, que el pecador empiece á amar á Dios gracias mas abundantes que un judio, está sin duda
como origen de toda justicia, sess. 6, can. 6. Este mas obligado á ser reconocido, y á amar á su bienhe.
principio de amor, dicen, no puede ser otra cosa chor. Hay un beneficio mas precioso que el perdon del
que una caridad todavia débil, pero pura por la pecado concedido al arrepentimiento por los méritos
que se ama á Dios por sí mismo. - -
de Jesucristo?
Los segundos ¿" que este principio de amor Pero queriendo llevar muy allá la perfeccion y la
es un amor de esperanza ó de concupiscencia, por el sublimidad de los sentimientos, hay peligro en ten
que nos dirigimos á Dios como al objeto de nuestra der un lazo á las almas timoratas y sofocar en ellas
felicidad eterna; que comparando las dos decisiones el amor de Dios por el temor, queriendo hacer todo lo
del concilio, se ve que tal es su sentido. Se apoyan contrario. Véase el Antiguo sacramentario por Gran
en la autoridad de Sio. Tomás, 2.2, º 17, que esta dcolas, 2.º part., p. 53, 68.
blece que la esperanza y todo movimiento de deseo
proviene de un sentimiento de amor, y que distingue Controversia. Disputa de palabra ó por escri
asi la caridad perfecta del amor imperfecto. Es im to en materias de religion. Esta clase de disputas son
posible, dicen, que un cristiano que cree la eficacia inevitables, porque el cristianismo ha tenido siempre
del sacramento, que espera alcanzar su efecto por la enemigos, y siempre los tendrá. Son necesarias, por—
misericordia de Díos, no sea movido de un senli que nada debe descuidar para atraerá buen camino
miento de reconocimiento de que Dios quiera perdo á los que se han estraviado. Si turban la paz, es ne—
nar por el arrepentimiento. Si el reconocimiento no cesario imputárselo á los que son los primeros auto
es el amor del bienhechor, ¿qué es pues? res, y que levantan la bandera contra la enseñanza
En 1700 el clero de Francia condenó la proposi de la Iglesia. Para que produzcan buenos efectos es
cion que decia que basta la atricion que nace del necesario que de una parte y otra sean no solamente
temor del infierno sin ningun amor de Dios. El clero libres, sinó que esten siempre contenidas en los lími
exige, pues, como el concilio de Trento, un princi— tes del decoro y de la moderacion.
io de amor de Dios; pero ¿de qué amor? Es el de Nos parece que en general los controversistas ca—
a caridad pura por la que se ama á Dios por sí mis tólicos, sobre todo los del último siglo, han obser—
mo, ó del amor de la esperanza por el que se ama á vado mejor esta regla que sus adversarios. Bossuet,
Dios como bienhechor? Ni el concilio ni el clero lo Nicole, Pelisson, Papin, etc., sirven de modelos en
establecen; hay, pues, temeridad en quererlo esta este género; no podemos proceder mejor que imi
blecer.
tándolos en nuestras disputas actuales con los incré
La hay mayor todavia en sostener que la caridad dulos. -

pura, cuando es débil, no es suficiente para justi Cuando principia una controversia, es raro que
ficar al pecador y reconciliarlo con Dios antes d Sa tome desde luego el giro que convendria darle para
Cramento.
terminarla prontamente. Como los novadores son
El partido mas seguro es atenerse á la decision todos solistas, nunca dejan de desnaturalizar la cues
del clero concebida en estos términos: «Hé aqui, se lion; los teólogos católicos que quieren seguirlos para
gun el concilio de Trento, las dos advertencias ó refutarlos se esponen á andar mucho fuera del ver—
puntos de doctrina que hemos juzgado necesarios. El dadero camino, sin adelantar un paso hácia su tér
1.", que por los sacramentos del bautismo y de la pe mino.
nitencia no hay absoluta necesidad de tener la con Asi, cuando aparecieron los pretendidos reforma—
tricion, concebida por el motivo de la caridad per dores, si se hubiera principiado por pedirles las prue—
fecta, y que con el voto del sacramento reconcilia al bas de su mision, se hubieran visto bastante emba
hombre con Dios antes de la recepcion actual del sa razados. Ellos no eran enviados por ningun pastor
cramento. El 2.º, que por uno ni otro de estos sacra legítimo, ni por ninguna sociedad cristiana, era, pues,
mentos el hombre no debe creerse en seguridad, si, necesario que probasen con milagros una mision so
ademas de los actos de fé y de esperanza, no em brenalural, estraordinaria, como Moisés, Jesucristo y
ieza á amar á Dios, como origen de loda justicia», sus apóstoles habian probado la suya; no eran nada
¿ dificil el no entender estas últimas palabras del menos que taumaturgos.
amor de reconocimiento. Segun, ellos la Escritura Santa debia ser la única
Los partidarios de la proposicion condenada, que regla de fé; la primera cuestion que habia que deci
han sido llamados los atricionarios, no se habian fun dir era el saber cuáles son los libros que se deben
 CON 515 CON
considerar como Escritura Santa. Desechaban una po de Jesucristo. Cada uno de estos tres disputadores
parte de los libros recibidos por la Iglesia católica; alega otros pasages de la Escritura para confirmar su
¿es tambien por la Escritura como se debia terminar esplicacion. Es, pues, el simple fiel á quien correspon
esta disputa? Si cada fiel debia juzgar de ellos segun de juzgar cuál de los tres tiene razon, y atenerse á su
sus luces y su gusto particular, ¿por qué el gusto de propio juio.
un católico era menos seguro que el de un novador? El fiel católico no desempeña asi el oficio de juez.
Todo hombresensato podia decirle: puesto que la Es Cuando la Iglesia ha decidido por medio de sus pas—
critura Santa es mi única regla de fé, no tengo nece tores, ya dispersos ó reunidos, que tal es el sentido de
sidad ni de vuestras lecciones, ni de vuestras espli un pasaje de la Escritura, somete su propio juicio al
caciones; yo sé leer tambien como vosotros; y o soy de la Iglesia, y cree humildemente lo que ella ha pro
el que tengo que ver en la Escritura lo que Dios ha nunciado. En realidad un protestante hace lo mismo
revelado en ella, y no vos el que me lo ha de demos— sin querer convenir en ello y sin advertirlo; antes de
trar. La Biblia es mi único doctor; la funcion de en— leer la Sagrada Escritura está ya dispuesto por el ca
senar que usurpais es ya una contradiccion con vues tecismo que se le ha enseñado en su niñez á dará los
tro mismo principio. pasajes de que se dispula el sentido adoptado por la
A la verdad nuestros controversistas les han hecho sociedad en que ha racido.
este argumento, pero no ha sido sino despues de lar Bueno es saber el juicio que han formado los pro—
gas disputas; hubiera sido mejor empezar por esto y testantes de nuestros controversistas y de sus diferen
no dar tiempo á estos hombres sin voto para seducir les métodos; lo que ha dicho Mosheim nos parece dig
á los ignorantes con la ostentacion de su doctrina. no de algunas relecsiones.
La misma falta se habia cometido en las disputas Hablando del nacimiento del luteranismo y de las
que hubo en los siglos precedentes con los husilas, los disputas con respecto á la confesion de Augsburgo,
wiclefitas, los valdenses, los maniqueols, lamados al (Hist. eccles del siglo XVI. se c. 3, c. 2, S.) dice que
bigenses. En las obras que se han escrito contra ellos no habia mas que tres medios para terminarlas: el
no vemos que se haya insistido en la falta de mision primero y el mas razonable, á su parecer, era con
de estos novadores, ni en la contradiccion de sus ceder á las protestantes la libertad de seguir sus sen
principios. /
- timientos particulares, y de dejarlos servir á Dios
A principios del siglo III, Tertuliano habia trazado segun el dictamen de su conciencia, con tal que no
en su Tratado de las prescripciones contra los hereges perturbasen la tranquitidad pública. ¿Pero se podia
el modo de refutarlos á todos; les pide pruebas de su establecer el protesantismo sin perturbar la tranqui
mision, les rehusa entrar en disputas sobre la Escri— lidad pública? Se trataba no solo de abrazar nuevas
tura, les opone la tradicion de las iglesias apostólicas, opiniones especulativas, sino de abolir las prácticas,
les confunde con sus propias divisiones y con la opo el culto esterior y toda la disciplina de la Iglesia,
sicion constante de sus diversos sistemas. Un teólogo desposeer á los obispos y á los sacerdotes, esclaustrar
católico no puede obrar mejor que siguiendo siempre los monges y las religiosas, etc. Ningun novador,
este método: no solamente es invencible, sino espe— enando ha llegado á ser gefe, ha dejado á los católi
table por su antigüedad. cos la libertad de servir á Dios segun el dictamen de
Despues de haber establecido que la Sagrada Es su conciencia; Lutero en Wurtemberg, Zuinglio en
critura es la única regla de fé, han pretendido los Zurich, Calvino en Ginebra, han tolerado el ejerci
protestantes tambien que es el único juez de las con cio del catolicismo? En 1530, cuando el elector de
lroyesias. Pero desde luego es abusar de la palabra Sajonia y demas príncipes protestantes presentaron
el llamar juez á la ley, según la cual este debe senten su confesion de fé en la dieta de Augsburgo, empeza
ciar, y cuyo sentido verdadero debe determinar. En ron por jurar y prometer que concederian á los cató
todas las controversias la cuestion es el saber si tal licos la misma libertad que pedian para ellos? No
dogma está revelado en la Sagrada Escritura, ó no lo ecsistia ya la religion católica en sus estados. -

está, cuál es el verdadero sentido de los pasajes que El segundo medio era obligar á los protestantes
cada partido alega para apoyar su opinion "¿Como con la espada en la mano á volverá entrar en el seno
puede esta misma Escritura hacer el olicio de juez y de la Iglesia. Este método, dice Mosheim, era el
terminar la disputa? Es evidente que el simple parti mas conforme al espíritu del siglo, sobre todo, al ge
cular que rehusa toda especie de tribunal se hace él nio despótico y á los consejos sanguinarios de la
mismo juez de lo que debe creer. corte de Roma. Proponiendo un tercer medio que
Para terminar, por ejemplo, la controversia con era empeñar á los dos partidos contendientes á mo
respecto á la Eucaristia, se trata de saber cuál es el derar su celo, y ceder en algo de sus respectivas
sentido que debe darse á estas palabras de Jesucristo: pretensiones, dice que fué generalmente aprobado,
hoe est corpus meum. Segun la creencia de la Iglesia ue el papa mismo parecia que ni lo desechaba ni
católica, significan que el cuerpo de Jesucristo está ¿ no se reprendió á ninguno de los teó—
verdaderamente presente bajo las apariencias de pan; logos que entraron en conferencia con los novadores;
que ya no es pan, sino el cuerpo de Jesucristo. Segun ¿dónde están, pues, las pruebas del espíritu opesor
la opinion de Lutero este cuerpo está allí verdadera— del siglo, y del genio despotico y sanguinario de la
luente, pero con el pan, en el pan ó debajo del pan; corte de Roma? Conviene Mosheim, S.5, en que no
que en él no se verifica ningun cambio. Si oimos á habiendo producido ningun efecto los medios de con
Calvino, estas palabras significan solamente que este ciliacion, hubo que recurrir á la fuerza del brazo se
pan es la figura de mi cuerpo; pero el fiel, conniendo cular, y á la autoridad imperiosa de los edictos. Lue
esle pan, recibirá por la é, y espiritualmente, el cuer go no se apeló á esto hasta el último estremo, y obli
 CON 516) CON

gados á ello, no solo por la terquedad con que los tres consultores del Santo Oficio. Se ha traducido en
rotestantes rehusaban toda instruccion, sino por los muchas lenguas; y, hay atrevimiento para escribir
echos y las ¿ que emplearon para estermi que en 1685 lo condenó la universidad de Lovaina;
a religion católica. que Clemente XI, que ocupó la Sante Sede en 1070,
". los diferentes métodos de que se han
validó los controversistas de la Iglesia romana para
rehusó el aprobarlo. Despues de un siglo entero de
elogios prodigados á esla obra, no se ruborizan
atraerá los protestantes, no ha cuidado de decir en decir que es un fraude piadoso, inventado para
Mosheim que siempre empezaron por probar nues. engañará los protestantes. Cien veces se les ha di
tros dogmas por la Sagrada Escritura. ¿Por qué este cho: ¿quereis firmar una profesion de fé conforme á
silencio afectado? Es que este proceder de nuestros aquella? La Iglesia católica os recibirá en su seno
controversistas satisface y os absolvera de toda heregía. Ninguno de ellos
réplicas y clamores de loscompletamente
protestantes. áEllos
las quejas,
no re queria hacerlo, y persisten en decir que no es esto
claman nias que la #º Escritura, y cuando se lo que creen los católicos.
opone, no la atienden. . . . . -
Añadamos qne esta esposicion de nuestra doctrina
lº con moderacion del jesuita Berlamino y de es precisamente la misma que la que ya habia hecho
sus controversias, sec. 3, 1" part, c. 1, S. 29; hace Francisco Veron, cura de Charenton, que murió en
justicia no solo á los talentos de este escritor, Sin0 1649; y que se titula Regula fidei catholica. Asi
al candor y sinceridad con que propone las razones Mosheim coloca á este controversista, con los her—
las objeciones de sus contrarios en toda su fuerza; manos Wallembourg y otros, entre los que no dis
espues, por un rasgo tenido
de puramas
malignidad, añade que ulan de buena fé. Quisiéramos saber en qué se les
esté teólogo hubiera repulacionerº los a convencido de mala fé.
de su cominion, si hubiera tenido menos esactitud y Mas no dá mejor idea de los conciliadores, aun
buena fé; ¿dónde está la prueba? Entre los mismos prolestantes, lales como Le Blanc, dº Huisseaux, La
rivales de los jesuitas, ha habido uno solo que haya Milleliere, Forbes, Grocio y Jorge Calisto. No se
vituperado á Belarmino por su esactitud y buena fé? atreve á decidir siobraron por amor á la paz, ó por
Se le ha echado en carade sus
quizáventajas,
el no haber sabido miras de interés y de ambicion. Eran, dice, media
aprovecharse bastante de no haber dores imprudentes, que no convenian entre sí, y
dado á sus respuestas lanta fuerza como les han dado que no tenian bastante ingenio ni destreza para elu
los controversistas posteriores; esto es muy diferente. dir los sofismas de los católicos. Asi, no sacaron
Algunas líneas mas arriba habia dicho Mosheim que otro, fruto de sus trabajos que descontentar á los dos
partidos, y grangearse el vituperio de sus Iglesias.
los controversistas jesuitas habian escedido á todos
los demas en sutileza, en descaro, y en invectivas:Ibid. S. 1. Los que han querido aprocsimar á los
no es muy á propósito el ejemplo de Belarmino para luteranos y calvinistas, ó conciliar á los anglicanos
justificar este defecto. .. . con las otras dos sectas, no han tenido mejor éxito.
a --

No ha estado mas equitativo con los controversis V. svNCRETisTAs.

tas1,delS. siglo último, siglo XVII, sec.sus
2",talentos
1 º parte, Está, pues, demostrado que los protestantes nun
c. 13. Sin atreverse á deprimir los ca han querido la paz sino la guerra. Cualquier me
acusa de haber recurrido á los faudes piadososos, por dio de instruccion, cualquier modo de conciliacion,
que procuraban hacer ver que los protestantes desfi cualquier método de descubrir la verdad les ha des
guraban los dogmas católicos para hacerlos odiosos; agradado siempre. Siempre se han quejado del tono
que esponiéndolos tales como son, no son lan opues de altaneria y despolismo de la corte de Roma, y
los los sentimientos de los proleslantes como eslos siempre han desconfiado de cualquier paso que haya
pretenden. Esto es lo que ha hecho particularmente dado para volverlos á atraer; porque han conocido,
Bossuet en su Esposición de la fé católica, que apa dicen, que su objeto era menos reconciliarse con
reció en 1671. Mosheim observa desde luego que es ellos que el procurar á sus obispos el imperio des—
tos teólogos conciliadores obraban, en su nombre pótico que ejercian entonces en el mundo cristiano.
ropio y privado, sin estar autorizados para ello por Asi es, que á falta de agravios esteriores, denigraban
os gefes de la Iglesia; observacion bien ridícula. ¿Es los motivos y las intenciones, verdadero lenguage de
necesario para entrar en la controversia esta pro los hijos ingratos que se rebelan contra su madre.
vistos de un poder de la Iglesia universal? En una Sin embargo, los controversistas católicos no han
dejado de hacer de tiempo en tiempo conversiones;
nota del traductor se dice que el papa no aprobó esta
esposicion de la sino al cabo de nueve años que ro Mosheim, fiel al espíritu de su secta, las atri
Clemente XI rehusó aprobarla; y que en 1683 la uye á motivos viciosos. V. coNversioN.
universidad de Lovaina la condenó como un libro Nuestros literatos modernos dicen que cualquiera
escandaloso y pernicioso. que se consagra á la polémica y á las hostilidades de
i aquilas fábulas con que se abusa de la credu. la pluma, sacrifica el porvenir al presente; que que
lidad de los protestantes. Él Breve de aprobacion de riendo divertir ó entretener á sus contemporáneos,
este libro, dado por Inocencio XI, es de lº de enero consiente ser indiferente para los que vendrán des
de 1679; y le dió para hacer callar á los protestantes pues. Sea asi; iniérese de esto que los controvesistas
que publicaban que Bossuel no esponia fielmente la prefieren el interés de la verdad y de la religion á la
fé de la iglesia romana. Ya en 1672 habia sido apro vanagloria que únicamente buscan la mayor parte de
bado por once obispos de Francia, por los cardenales los demas escritores. Este no es un objeto de vitupe
Bona y Chigi, por el maestro del sagrado palacio; lo rio. Mas la reflecsion de sus censores es falsa por sí
fue despues por el obispo de Paderboru, y por dos ó misma. Las obras de controversia de Bossuet y de al
 CON 517 CON
gunos otros no tienen en el dia menos reputacion que sino á todos los que hubieran podido alentarlos á en
en el siglo pasado, ni que los escritos de los autores trar en sí mismos. Triunfan cuando han logrado que
que han tratado otras materias. La mayor parte de muera un pretendido filósofo con la insensibilidad de
los escritos de los PP. se han hecho para refutará un animal. Cuando las mugeres en una edad mas
los paganos, á los judios ó á los herejes, y serán lei avanzada empienzan á tener una vida mas regular y
dos y apreciados mientras haya cristianos celosos de mas cristiana que en su juventud , dicen que se con
su religion; no les honra mucho el desprecio que ha vierten, no porque estan disgustadas del mundo, sino
cen de ellos los protestantes. porque el mundo está disgustado de ellas. Aunque es
to fuera cierto, demostrarian mas prudencia que las
Convento. V. MoNAsTERIo. que se obstinan en estar unidas á él, á pesar del des—
precio y de la indiferencia que se tiene hácia ellas.
Conventuaal. V. FRANCISCANo. Pero en general es una injusticia absurda penetrar los
motivos interiores y las intenciones secretas de nues—
Conversion, cambio». Se dice no solo del tros semejantes, y juzgar que son viciosas cuando pue
pecador que se arrepiente de sus culpas, y se deter den ser buenas y laudables.
mina sinceramente á espiarlas y corregirse de ellas, Con derecho se echa en cara esta iniquidad á los
sino tambien de un hombre que abandona el error pa. protestantes: 1." Ellos han sospechado de los motivos
ra profesar la verdad. Algunas vecesla Escritura San por los que los pueblos bárbaros, los godos, los fran
ta parece enseñarnos que nuestra conversion es obra cos, los borgoñones, los vándalos, los lombardos han
de nosotros, con frecuencia tambien nos hace com abrazado el cristianismo y se han unido á la Iglesia
render que es obra de la gracia. Un profeta dijo á despues de haber profesado el arrianismo. Sus conje
os judios de parte de Dios: «Convertios á mí, y yo turas provienea de pura malignidad y del interés de
me convertiré á vosotros». (Malaq., c.3, y. 7). Ótro su sistema, puesto que no tienen ningun fundamento
dijo á Dios: «Convertidnos, Señor, y nosotros volve razonable. Asi estan autorizados los incrédulos para
remos á vosº; (Thren. , c. 5, y . 21), porque la con tener las mismas sospechas sobre los motivos de con
version es á la vez el efecto de la gracia que nos pre version de los judios y de los paganos en los primeros
viene, y la voluntad que corresponde libremente á la tiempos del cristianismo, y no han faltado á esto los
gracia. Mas la invitacion que Dios hace á los peca incrédulos. V. MisioNEs.
dores para º se conviertan seria ilusoria, si rehusa— 2 º Han considerado lo mismo el cambio de los
se prevenirlos con la gracia. que han renunciado al protestantismo para volverá
Hay teólogos que miran la conversion de un peca entrar en el seno de la Iglesia romana, ya en Francia,
dor como un milagro tan grande y casi tan raro, como ya en otras partes; no han perdonado ni á los prínci
la resurreccion de un muerto; en su consecuencia es, ni á los sabios que han tenido este valor. Mos
son muy reservados para conceder á los pecadores eim dice; que si se esceptuan aquellos á quienes la
la absolucion y la comunion, persuadidos que una y adversidad, la avaricia, la ambicion, la ligereza, las
otra son únicamente para los justos ó para los peca afecciones personales y el imperio de la supersticion
dores convertidos hace mucho tiempo. En esta mate— sobre las almas débiles han obligado á este paso, el
ria es muy facil caer en uno de dos escesos, ora fián— número de estos prosélitos es muy pequeño para es—
dose con facilidad en los menores signos de conver citar la envidia de las Iglesias protestantes. Jurieu,
sion, ora llevando muy allá la desconfianza, ora per— Spanheim y otros han hablado todavia con menos
suadiendose que los sacramentos estan destinados pa moderacion.
ra hacernos perseverar en el bien, y no para fortifi ¿Por qué, pues, nos acusan de calumniar cuando
carnos contra el mal. atribuimos á estos mismos motivos la apostasia de
Es necesario acordarse siempre que la penitencia los que han abrazado la pretendida reforma en su na
es el tribunal de la misericordia de Dios, y no el de cimiento? Príncipes que arrebataban los bienes ecle—
su justicia; que el hombre, siempre débil é incons siásticos y se hacian mas independientes, monges y
tante, no cumple mejor las determinaciones que ha religiosos que abandonaban los conventos para ca
hecho en una enfermedad de conservar su salud, que sarse, novadores que se ponian en lugar de los obis—
ejecula las que ha hecho en la penitencia de no pecar pos y, de los pastores, aventureros que adquirian el
mas; que asi las recaidas no son siempre una prueba derecho de ejercer el latrocinio, ignorantes acalora —
de poca sinceridad en las resoluciones. El mejor mo— dos por las fogosas declamaciones de los nuevos doc
delo que debemos imitar en el modo de dirigir á los tores ¿tenian motivos mas puros y mas repetables
pecadores, es la conducta de Jesucristo nuestro Di— que los príncipes y los sabios, cuya conversion depri
vino Maestro. --> -

men nuestros adversarios? Al menos hay en favor de

No es de admirar que los incrédulos pongan en ri— estos una presuncion de mucho valor; los sectarios
dículo toda especie de concersion. Cuando en una en sacudian el yugo de las leyes de la Iglesia, cuya pe
fermedad renuncia un impio á su impiedad, procu— sadez no han cesado de exajerar; los que las volvían
ran persuadir que ha tenido el espíritu debilitado á tomar, renunciaban á una libertad que es parecia
por el temor de la muerte, como si la obstinacion en muy dulce y muy cómoda. Despues que se calmó el
el error y en la irreligion, por no pasar el rubor de primer arrebato de fanatismo, no se han visto católi—
desdecirse, fuese la señal de un gran valor. Nada hay cos que abandonen una fortuna considerable, un es—
mas detestable que la perversidad de aquellos que tado honesto, una familia bien unida para hacerse
asedian á sus hermanos en los últimos momentos; protestantes, en lugar de que se pueden citar un gran
que no solo han apartado de ellos á los sacerdotes, número de protestantes que han hecho todos esto
TOMO l» 71
 (CON -

518 CON
sacrificios para volver á la antigua religion. No se Co-obispo, Obispo empleado por otro para des
conoce ningun apóstata del catolicismo que se hava empeñar por él las funciones episcopales; se llama
hecho mas hombre de bien por haberlo abandonado; tambien sufragáneo. Hay de estos obispos en Francia
se han visto al contrario un gran número de protes y Alemania, sobre todo en los electores eclesiásticos.
tantes convertidos tener hasta la muerte una vida Son diferentes de los coadjutores en que estos se han
muy edificante. Ahora bien, el Evangelio nos auto distinguido en suceder al obispo titular. Es necesario
riza á juzgar de los hombres por las acciones, y del no confundirlos ya con los coro—epíscopos; la mayor
arbol por sus frutos. A fructibus eorum cognoscetis parte de estos últimos no habian recibido la orde
eos. (Mat., c. 7, y. 16). nacion episcopal, eran simples sacerdotes. V. Con
EPISCOPO.

Convulsionarios. Secta de fanáticos que ha Copa. Vaso para beber del que se servian en los
aparecido en nuestro siglo, y que ha principiado en festines
la tumba del abate Paris. Los apelantes de la bula y en los sacrificios. En el estilo de la Sagrada
Unigénitus querian tener milagros para apoyar su Escritura, la copa de bendicion es aquella que se ben
partido; bien pronto pretendieron que Dios los habia decia en los banqueles de ceremonia, y en la que se
bebia á la ¿ Asi en la última cena de Jesucristo
obrado en su favor en la tumba del diácono Paris, fa
moso apelante; una multitud de testigos prevenidos, bendijo la copa ó cáliz de su sangre, y dió de beber
engañados ó hechizados los atestiguaron. de ella á todos sus apóstoles. El bebér en la misma
Muchos pretendieron esperimentar convulsiones copa era una señal de fraternidad.
en esta misma tumba ó en otras partes; se quiso tam La copa de salud es una copa de accion de gracias,
bien hacerlos pasar por milagros; esta nueva especie en la que se bebia bendiciendo al Señor por sus be
desacreditóla primera y cubrio de ridículo á sus par— neficios. Se dice en el libro III de los Macabeos que los
tidarios. Nunca han podido responder los apelantes á judios de Egipto, despues de su libertad, celebraron
este argumento tan sencillo: donde nacieron las con festines y ofrecieron copas de salud.
vulsiones, allí nacieron vuestros milagros; ambos tie V. COPA.
CÁLlz.
Significa tambien la porcion ó la division.
nen el mismo origen. Segun la confesion de los mas
sabios de entre vosotros, la obra de las convulsiones Cuando se encontró en el saco de Benjamin la copa
es una impostura ú operacion del diablo: luego lo de José, uno de sus oficiales dijo: «La copa que ha
mismo sucede con los milagros. beis robado, es en la que bebé mi Señor, y de la
En efecto, los mas sensatos de los apelantes han es— que se sirve para predecir el porvenir». (Gén, c.,
crito con vigor contra este fanatismo, lo que ha pro y. 5), ¿se servia José yerdadoramente de una copa
ducido entre ellos una division en anticonvulsionistas para predecir el porvenir? Seguramente que no: el
y convulsionistas. Estos se han subdividido en agus conocimiento que tenia del porvenir no era efecto del
arte, sino un talento sobrenatural que Dios le habia
linistas, vaillantistas, socorristas, discernientes, fi -
uristas, melengislas, etc. nombres dignos de ser co dado. El testo hebreo puede significar: «No es esta
ocados al lado de los de los umbilicales, iscariotis— la copa en la que bebe mi Señor, y por la que os ha
tas, stercoranislas, indorianos, orebilas, eonianos, puesto á prueba? -

y otras sectas tan esclarecidas. En las disputas de los católicos con los protestan—
Arnaldo, Pascal y Nicole, apelantes sensatos é ins— tes la copa significa la comunion bajo la especie de vi
truidos, no tenian convulsiones, y se guardaban muy no. V. CoMUNION BAJo LAS Dos ESPECIEs.
bien de profetizar. Un arzobispo de Leon decia en el Copale. Se llamaba asi en la Iglesia griega á
siglo IX con motivo de algunos supuestos prodigios de los que hacian las fosas para enterrar á los muertos;
este género: «Se ha oido nunca hablar de estas espe— nombre derivado del griego kopos, trabajo; estos
cies de milagros que no curan las enfermedades, sino eran ordinariamente clérigos. En 357 el emperador
que á los que estan buenos hacen perder el juicio y la Constancio eximió por una ley á los copiatos de la
salud? No hablaria asi de esto si yo mismo no hubiera contribucion lustral que pagaban todos los mercade
sido testigo; porque dándoles muchos golpes confesa res. Segun Bingham los habia en mucho uúmero, so
ban su impostura». Véase el Compendio de la historia hre todo en las grandes Iglesias; se contaban hasta
eclesiástica en 2 volúmenes en 12.º Paris 1752 sobre
mil ciento en la de Constantinopla; nunca ha habido
el año 8%. En efecto que es un estraño taumaturgo en ella menos de nuevecientos cincuenta. Se los lla
vl que estropea en lugar de curar. maba tambien lecticarii, decani, collegiati. Parece que
Quizá es tºdavia mas estraño, que los partidarios no exigian retribucion alguna por los entierros, so
de un fanatismo tan escandaloso y lan absurdo, ha— bre todo por los de los pobres; la Iglesia los mante
biendo aparentadoun pretendido celo de religion, ha nia de sus rentas, ó tenian algun comercio para sub
yan querido hacer creer que solo ellos eran sus defen sistir; y en consideracion al servicio que prestaban en
sores; nada ha contribuido mas á producir la incredu los funerales, Constancio los eximió del tributo im
lidad. Felizmente parece que este acceso de demencia puesto á los demas comerciantes. V. Bingham, Orig.
ha concluido. Ha habido en Inglaterra refugiados con eccles., t. 1, l. 3, c. 8. Tillemont, Hist. de los empe—
vulsionarios; eran los mismos que los profetas de los radores, t. 4, p. 235.
Cevennes. Schaftsbury, (Cartas sobre el entusiasmo,
sec. 3, p. 23). Sabemos que el Dr. Hecquet, en una Copon, Vaso sagrado; tiene la figura de un caliz
obra titulada el naturálismo de las convulsiones, grande cubierto, que sirve para conservar las hos—
¿gio.
demostrado la ilusion de este pretendido pro— tias consagaadas para la comunion de los fieles en la
lglesia católica.
 CON 519) CON

Se conservaba antiguamente este vaso en una pa— pretenden haber conservado hasta la actualidad la su
loma de plata colgada en el baptisterio, ó sobre el se cesion de sus patriarcas desde Dioscoro.
ulcro de los mártires, ó encima del allar, como lo Pero luego que los mahometanos se vieron tran
¿ observado el P. Mabillon en su liturgia galicana; quilos poseedores del Egipto, y no tuvieron ya nada
El concilio de Tours mandó colocar el copon debajo de que temer de parte de los emperadores griegos, que
la cruz que está en el altar. brantaron las promesas que habian hecho á los cop
Los teologos católicos han observado que el uso tos, prohibieron el ejercicio público del cristianismo,
de conservar la Eucaristia para la comunion de los y solo á fuerza de dinero han conseguido los coptos
enfermos es una prueba invencible de la fé de la que se les tolere, y que conserven su religion. Estos
Iglesia en la presencia real. Los protestantes han su cristianos son la parte mas pobre de los egipcios, y los
primido esta costumbre, porque no admiten la pre mahometanos la han encargado la recaudacion de los
sencia de Jesucristo, sino en el uso ó en la comu— tributos públicos de Egipto. Se dice que en tiempo de
nion, mas bien que en las especies consagradas. Pero la conquista eran en número de 600.000, y que en la
está probado que el uso de conservarlas es muy an actualidad se hallan reducidos á 15.000, lo mas.
tiguo, que se ha observado en las Iglesias orientales Desde que el árabe llegóá ser la lengua vulgar del
separadas de la Iglesia romana hace 1200 años. Véase Egipto, los naturales de este pais no entienden ya la
La perpetuidad de la fé tom. 4, l. 3, c. 1; tom. 5, lengua copta, que es una mezcla de griego y del
lib. 8, c. 2. antiguo egipcio; sin embargo han continuado cele
brando el oficio divino es esta lengua, y han tradu
Copom. Entre los autores eclesiásticos significa cido al árabe su liturgia, á fin de que los sacerdotes
tambien un dosel pequeño levanlado sobre cuatro co tengan conocimiento de lo que dicenen copto. En cuan
lumnas encima del altar. Se ven algunos en las iglesias to á las lecciones del oficio, las epístolas y los evan—
de Paris y de toma; es lo mismo que pabellon; los elios, despnes de haberlos leido en legua copta, los
italianos le llaman ciborio ó tabernáculo aislado. een en una biblia árabe para entender lo que se ha
Véase el antiguo sacramentario por Grandcolas pri leido. W. BibLIA coPTA. Su breviario es muy largo.
mera parte, págs.92, y 728. En general el clero copto es pobre é ignorante. Se
compone de un patriarca y obispos en número de diez
Coplatas ó coptos. Cristianos de Egiplo, de ó doce. El patriarca es elegido por los obispos, por el
la secta de los jacobitas ó monofisitas, que no admi clero y por los principales seglares; lo sacan siempre
tian mas que una naturaleza en Jesucristo. Se some de los monges del monasterio de S. Macario en el de
tieron al patriarca de Alejandria: se deriva ordina— sierto de Scete. El solo nombra los obispos, que los
riamente su nombre de Copta ó Coptos, ciudad de elige de entre los seglares yiudos: el diezmo es toda
Egipto; pero esto quizá no es mas pue una alteracion su renta y lo recogen en toda su diócesis para ellos y
de la palabra AlGUPTos, nombre griego del Egipto. para el patriarca. Los sacerdotesordinariamente son
Como esta Iglesia cismática se separó de la Iglesia simples artesanos: aunque tienen la libertad de casar
romana hace mas de 1200 años, es bueno conocer su se, muchos se abstienen de ello, observan la conti
origen, su creencia y su disciplina. nencia, son muy respetados por el pueblo y tienen bajo
Despues de la condenacion de Eutiques en el con— sus órdenes á los diáconos; entrelos coptos hay monges
cilio de Calcedonia, en 51, Dioscoro, patriarca de y religiosas; unos y otras hacen votos.
Alejandria, hombre afamado y muy respetado de los Tienen tres liturgias, una de S. Basilio, otra de
egipcios quedo tenazmente adherido al partido y á la S. Gregorio Nacianceno, la tercera de S. Cirilo de
doctrina de Eutiques; tuvo la habilidad de persuadir Alejandria; se han traducido en lengua copta del ori
á su clero y pueblo que, el concilio de Calcedonia, ginal griego. La última es la mas parecida á la de
condenando Eutiques, habia adoplado y consagra S. Marcos, que se cree ser la antigua liturgia de que
do la herejia de Nestorio, aunque este con ilio ana se servia la iglesia de Alejandria antes del cisma de
tematizó á los dos. Las vajaciónes y violencias que Dioscoro, ó antes del siglo V los catolicos de Egipto
emplearon los emperadores de Constantinopla para continuaban sirviéndose de ella mientras que subsis
ue se recibiesen en Egipto los decretos del concilio tieron: pero los cismáticos prefirieron aquella de que
e Calcedonia alejaron los ánimos; se enviaron de hemos hablado, y han introducido en ella su error
Constantinopla patriarcas, obispos, gobernadores, con respecto á la unidad de naturaleza en Jesucristo.
magistrados; los egipcios, escluidos de todas las dig V. LITURGA, S. 2. -

nidades civiles, militares y eclesiásticas, concibieron Este es el único error que se les puede echar en
un odio violento contra los griegos y el catolicismo; cara en cuanto al dogma; en todos los demas artícu
gran número de ellos se retiraron al alto Egipto con los de la doctrina cristiana tienen la misma creencia
Su patriarca cismático. qne la Iglesia remana. Se ve por sus lilurgias, por
lácia el año 660, cuando los sarrecenos ó maho— sus demas libros y por sus confesiones de fé, que ad
melanos árabes vinieron á atacar el Egipto, los coptos miten siete sacramentos, pero difieren el bautismo de
ó Egipcios cismáticos entregaron los puestos que de los niños hasta los cuarenta dias, y el de las niñas
bian defender, y obtuvieron por tratados el ejercicio hasta los ochenta. No lo administran inunca sino en la
público de su religion; asi con la proleccion de los iglesia, y en caso de peligro creen suplirlo por medio
mahometanos, los coptos á su vez se hallaron en esta de unciones. Lo confieren por tres inmersiones: la
do de oprimir á los griegos católicos que se hallaban - primera en nombre del Padre, la segunda en nombre
en Egipto, y hacerlos sospechosos á sus nuevos seño del Hijo, y la tercera en nombre del Espíritu Santo,
res. Desde entonces han prevalecido los coptos; y adoptándó ácada una las palabras de la formula or
 CON seo CON
dinaria: Yo te bautizo, etc. Dan al niño la confirma fesan la doctrina que ellos defienden ser la creencia
cion y la comunion únicamente bajo la especie de vi antigua y primitiva.
no inmediatamente despues del bautismo. Añadamos que los coptos no desechan del canon de
En cuanto á la Eucaristia creen como los católicos los libros sagrados ninguno de los que la Iglesia ro
la preseucia real de Jesucristo, la transustanciacion mana recibe como canónicos. Véase La perpetuidad de
el sacrificio; este es un hecho probado demostrativa la fé, t., l. 1, c. 9 y 10; la coleccion de liturgias
mente por su liturgia. Los hombres comulgan bajo orientales por el abad Renaudot; el P. Lebrun, t. 4.
las dos especies y llevan á las mugeres solo la especie p. h69 y sig.
de pan, humedecida con algunas golas de vino con Se ha intentado muchas veces, aunque inútilmente,
sagrado; nunca sacan el caliz consagrado fuera del reunir los coptas á la Iglesia romana.
santuario; en el que no se permite entrará las mnge Los protestantes hacen observar con afectacion la
res. Cuando es necesario administrarlo á un enfermo, resistencia de estos herejes á las instrucciones de los
se dice la misa á cualquiera hora; no dan el viático misioneros católicos; pero no dicen nada en cuanto á
mas que bajo la especie de pan. - la conformidad de la creencia de la Iglesia copta con
La confesion es muy rara entre ellos, pues se con— la de la Iglesia romana. En las Memorias de la Aca -
fiesan á lo mas una ó dos veces al año; pero atribuven demia de las Inscripciones, t. 57 en 8.ºp. 385, hay
á la penitencia y á la absolucion el poder de remitir una sabia memoria sobre la lengua copta ó egipcia.
los pecados, á las que van acompañadas ordinaria
mente las unciones. Corazon. En la Sagrada Escritura se toma, 1.”
Parece que no falta nada en el modo como hacen la por el interior ó el lugar mas profundo; asi se
ordenacion para ser un verdadero sacramento; la del dice, Ps. 9, y.5, que los montes serán transportados
patriarca se verifica muy solemnemente y con muchas al corazon de la mar. Mat., c. 12, y: 0, que el Hijo
oraciones. Miran el matrimono como un sacramento; del hombre estará tres dias y tres noches en el corazon
pero usan con bastante frecuencia del divorcio. de la tierra.
Administran la Estrema-uneion en las indisposi 2." Por los pensamientos interiores, los deseos,
ciones mas leves; ungen con el aceite bendito, no solo y las afecciones del hombre. En este sentido Dios
al enfermo, sino á todos los asistentes. Como tienen un sondea los corazones y los riñones, Ps. 7, y 10; co
aceite bendido diferente del que se sirven para los sa noce los pensamientos y las afecciones mas secretas.
cramentos, hacen con él unciones á los muertos. Donde está vuestro tesoro, alli está vuestro corazon,
Se hallan en sus liturgias la invocacion de los san Mat., c. 6, y. 1; alli estan todas vuestras afecciones.
tos, la oracion por los difuntos, y no se les acusa de En este mismo senlido la Escritura atribuye á Dios
que viluperen el culto de las imágenes y de las rel un corazon y entrañas. Gén, c. 6, y . 6, dice que Dios
quias. No se les puede echar en cara que hayan cam se afligió en su corazon para espresar una grande in
biado ó alterado estas liturgias, escepto sobre el ar— dignacion. Jerem , c. 19, y.5. Esto no ha entrado en
lículo de una sola naturaleza en Jesucristo, pues que mi corazon, es decir: no lo he querido ni ordenado.
en lodo lo demas se hallan conformes á las de los Se dice de David, I Reg., c. 13, y. 14. El Señor ha es
griegos, de los sirios, de los armenios y de los nes cogido un hombre segun su corazon: muchos críticos
torianos, con los que los coptos no han tenido mas vín han preguntado cómo un rey culpable de homicidio
culo que con la Iglesia romana. y adulterio podia ser segun el corazon de Dios; pero
Susayunos son largos, frecuentes y rigorosos. Ob entonces Davíd no habia cometido ningun crimen;
servan cuatro cuaresmas: la primera antes de la Pas las palabras citadas significan solamente: el Señor ha
cua, empieza nueve dias ante que la de los latinos; escogido un hombre que le agrada, y al que tiene
la segunda, despues de la semana de Pentecostes y afecto.
antes de la fiesta de S. Pedro y S. Pablo, es de tre 3." El corazon designa algunas veces las relec
ce dias; la tercera, antes de la Asuncion, es de siones ó la sabiduria en los Proverbios, c; 28, y 28,
quínce dias; la cuarta, antes de la Natividad, es de un hombre sin corazon es un insensato; fiarse en su
cuarenta y tres dias para el clero y veinte y tres para corazon es fiarse en su propia sabiduria.
el pueblo. ...º Significa tambien el esfuerzo y el valor. Deute
Es, pues, evidente que, esceptuando un soloartículo ronomio c. 26, y . 8, etc.
de doctrina, la lglesia copta ha conservado esacla 5.º. En el sentido mas frecuente espresa la vo
mente la misma creencia que la Iglesia romana; y asi luntad, los deseos, las resoluciones; asi Dios cambia
antes del concilio de Calcedonia y del cisma de Dios nuestros corazones con su gracia, cuando nos hace
coro, esta creencia era la de la Iglesia universal. In querer lo no queriamos, y aun algunas veces lo
justamente los protestantes, han sostenido que esta contrario de lo que habiamos determinado. -

doctrina es nueva é inventada en los siglos posterio CORAZONDEVOCIONAL SAGRADO). Esta

res. Hállase entre los griegos cismáticos, los sirios, devocion simbólica que se ha propagado tanto hace
jacobitas y los nestorianos, en la Persia, en las Indias, cierto número de años entre las almas piadosas, porque
omo tambien entre los egipcios y los eliopes. Estas el amor del Hijo de Dios se borraba antes entre loshom
Iglesias no se han convenido entre sí, ni con la bres, no consiste solamente en amar y honra con un
Iglesia romana para cambiar su fé, su liturgia y su culto singular este corazon de carñe semejante al
disciplina. Parece que Dios las ha conservado para nuestro, que forma una parte del cuerpo adorable
atestiguar la antigüedad de los dogmas de que han de nuestra Salvador. Su objeto y n:olivo principal es
lomado pretesto los protestantes para hacer un cisma.el amor inmenso del llijo de Dios, amor que le ha
Estos últimos son los únicos en el universo que pro— conducido á entregarse por nosotros á la muerte, á
 COR 521) RCO
darse entero á nosotros en el augusto sacramento del celebrase esta fiesta en sus diócesis, y obligará sus
altar, sin que todas las ingratitudes, los desprecios, colegas á seguir su ejemplo, lo que se ejecutó, Mu
las injurias, los ultrajes que debia recibir en éste es— chos prelados dieron tambien pastorales para indicará
tado de víctima ¿ hasta el fin de los siglos, y sus fieles lo que debian pensar sobre está devocion, y
que le eran perfectamente conocidos, hayan podido para responderá las objeciones de los que la critica
impedirle el esponerse todos los dias á los insultos y ban, porque no tenia la aprobacion de todos. Unos,
á los oprobios de los hombres, para atestiguarnos á cuyos ojos toda práctica religiosa es supersticion, se
mas eficazmente el esceso de su ternura. El fin que burlaban de ella como de las demás. Otros, que sobre
nos proponemos es: 1.º Reconocer y honrar tanto este punto se unian á los filósofos, hablaban de la de
cuanto podemos por nuestras frecuentes adoraciones, voción del sagrado corazon como de una especie de
nuestro agradecimiento y toda clase de homenajes, idolatría, y la ponian en ridículo en cualquier ocasion.
las admirables disposiciones de este sagrado corazon, Tambien escribieron en contra de ella; es notable
los sentimientos de amor que Jesucristo tiene por nos que se sirvieron muchas veces de las objeciones
olros en la Eucaristia. 2.º, Reparar por todos los con que los protestantes combalen la Eucaristia:
medios posibles el vilipendio, y los uitrajes á que Pero bien saben los verdaderos fieles que el culto del
este amor le espone todos los dias en el Santísimo Sa sagrado corazon no es mas que un modo de escitar
cramento, y porque tenemos necesidad, aun en el en nosotros el amor del Hijo de Dios, y hasta la apro
ejercicio de las devociones mas espirituales, de ob— bacion de la Iglesia para los que no , buscan mas
jetos naturales y sensibles, que hiriéndonos mas nos que instruirse. Esto no ha impedido á algunos genios
renuevan su memoria y nos facilitan su práctica; asi vehementes formar nna herejía con el nombre de Cor
se ha elegido el sagrado corazon de Jesus como ob— dícolas.
jeto sensible mas digno de nuestros respetos y ado * CORAZON (INSTITUTO DEL SAGRADO). Con
raciones. Esta es, dice santo Tomás, la fuente y el gregacion reciente dedicada sobre todo á la cristiana
asiento de aquel amor inmenso de que el Salvador se educacion de los jóvenes, y que en Francia, en Italia
ha abrasado siempre por todos los hombres, amor y América produjo el mayor bien.
que pretendemos ser el objeto particular de esta de Con el mismo nombre se habia formado un institu
vocion. Asi la ternura sin límites que Jesus tie to en 177 en Becorche, en el monte Líbano, por En
ne por nosotros y de la que nos dá pruebas tan visi dien, ó Sor Ana-Maria Agemi, que pretendía tener
bles en la Eucaristia es el motivo principal de la revelaciones y se habia dado una vicaria en otra her
devocion; la reparacion del desprecio que se hace demana. Sor Catalina, sujeta á las mismas ilusiones.
esta ternura es el fin principal de ella; el sagradoEngañóá muchas personas, con especialidad al obispo
corazon de Jesus, encendido todo de amor es el obje German Dialo, y al mismo patriarca Pedro Stefani.
lo sensible; un sacrificio tan afectuoso como ar Como alteraba la paz de esta Iglesia con profecias ridí
diente hácia la persona del Salvador debe ser su culas, pretendiendo hallarse unida en cuerpo y alma
fruto. con Jesucristo, intervino la Santa Sede. Declaró
Un gran número de santos habian autorizadola de en 1779 que Endien estaba sujeta á ilusiones, que sus
vocion al sagrado corazon de Jesus, y enseñado revelaciones eran falsas é inventadas, que se le
cuán útil es para la salvacion de los hombres, antes obligase á retractarse, que sus escritos y los de
que una venerable hermana de la Visitacion, ilumi Catalina se quemasen, y que se aboliese el nuevo
nada con lasluces mas vivas del espíritu de Dios, fuese Instituto. El patriarca, que habia rehusado someter
elegida para propagarla. se al principio, habiendo reconocido sus errores,
Esta devocion inspirada á la venerable Margarita ¿ vuelto á poner en ejercicio de sus derechos por
Maria Alacoque establecida por el P. de La-Colom jo VI.
biér, servidor de Dios todavia mas ilustre por su glo
riosa cualidad de confesor de Jesucristo en Inglaterra, Corban. En la Sagrada Escritura significa esta
¿ or sus escelentes obras y por el título de pre palabra un don, una oblacion, lo que se ha dedicado
icador de la duquesa de York, que llegó á ser rei al Señor. Jesucristo refuta en el Evangelio la falsa
na de la Gran Bretaña; sancionada por el aprecio de moral de los fariseos que dispensaban á los niños de
todas las personas en que el mérito igualaba á la vir socorrer á sus padres y madres en la necesidad, con
tud; confirmada de un modo tan patente por los pro el pretesto de ¿ corbanes ú oblaciones al Señor
digios que manifiestan su eficacia, en el número de Marc., c. 7, y . 11.
los cuales se debe colocar la cesacion repentina de
la peste en Marsella: esta devocion, decimos, se pro Corbulo. Monte de Toscana, á doce millas de
pagó con un éxito maravilloso en toda la Fran Sienna, que ha dado nombre á los canónigos regula
cia, se estendió hasta Polonia, pasó los mares, flore res de Monte Corbulo.
ció en Malla y en Quebek, llegó hasta las Indias y la
China, autorizada como estaba por muchos Breves, Cordelero. Religioso franciscano ó del Orden
entre otros uno de Benedicto XIV, del 28 de mayo de de S. Francisco de Asis, instituida á principios de si
1757. Habiendo aprobado el 28 de enero de 1765 un glo XIII. En su origen iban vestidos de basto sayal
decreto de la congregacion de ritos el culto del cora gris, con una pequeña capucha ó capillo, un manto
zon de Jesus, Clemente XIII sancionó este decreto el 6 de la misma tela, y un cinturon de cuerda con res
de febrero siguiente. Poco despues fue cuando los nudos, de donde les viene el nombre de cordeleros. Se
obispos de la asamblea del clero de Francia determi llaman pobres menores y tambien hermanos menores;.
narón en una deliberacion con este motivo que se renunciaron á toda propiedad.
 COR 522) COR
Estos religiosos pueden ser miembros de la facnltad celebrado en 340, que fijó los límites de la juris
de Paris, muchos han sido papas, cardenales, obis icion de los cor-epíscopos; el concilio de Riez que
pos; en ellos ha habido grandes hombres en muchos redujo á Armentario á esta dignidad el año 439, es el
ranios, particularmente el hermano Bacon, célebre rimer concilio de Occidente que ha hablado de ella.
por los descubrimientos que hizo en un siglo de tinie l pontífice Leon III queria abolir este título, se le
blas. Esta Orden ha servido útilmente en todos impidió por el concilio de Ratisbona.
tiempos á la Iglesia y al Estado; en el dia todavia se Los cor-epíscopos no habian recibido todos la orde
distingue por su saber y sus costumbres. Los cordele nacion episcopal, sino solamente un grado de jurisdi
ros se han dividido en concentuales y observantes. cion sobre los demas sacerdotes; sin embargo,
El P. Lucas de Wading, cordelero irlandés, que dian ordenar á los clérigos menores y á los subdiáco—
murió en Roma en 1655, ha dado en un volúmen en nos, y administrar en union con el obispo diocesano,
folio la biblioteca de los escritores de su Orden, que se el diaconado y el sacerdocio. Aquellos que en Occiden
ha continuado y corregido por el P. Francisco Herol. te quisieron atribuirse todas las funciones episcopales
fueron reprimidos; se suprimieron enteramente en el
Cordeleras. Estas son las franciscanas ó reli siglo X, y los sustituyeron los arciprestes y los deanes
giosas de santa Clara, llamadas urbanistas. Como la rurales. En el dia algunos obispos cuyas diócesis
regla que habia dado S. Francisco de Asis pareció de son muy estensas, tienen vicarios generales encarga
masiado austera para las hermanas, el papa Urba dos de desesmpeñar muchas funciones episcopales
no IV en 1253 dulcificó esta regla, y permitió álas re en una parte de su territorio; tales son en Francia
ligiosas claras el poseer bienes raices. Hubo, no obs los vicarios generales de Pontoise y de Moulins. El
tante, muchas casas de ellas que perseveraron en el primero de los subdiáconos de S. Marlin de Utrecht,
rigor del primer instituto, y aun de las urbanistas el primer chantre de las colegiatas de Colonia y al
muchas vinieron á ellas, ya por la reforma de santa gunas dignidades de los cabildos de Tréveris tienen el
Coleta, llamada en el siglo Nicolasa Boillet, ó por título de cor epíscopos, y desempeñan las funciones de
otras reformas. Estas clarisas sin mitigar ó reformar, deanes rurales. Bingham, Orig.eeles., l. 2, c. 14, S.,
se conocen con los nombres de religiosas del Are-Ma piensa como otros muchos teólogos anglicanos que
ria, decapuchinas, recolelas, hermanas de la Concep todos los cor-episcopos, habian recibido la ordenacion
cion, penitentes de la tercera Ordenó tercelinas, lla episcopal; pero las pruebas que dá de ello no son sin
madas en Paris hermanas de santa Isabel. réplica.
Mosheim hace subir mas el origen de los eor epis
Cordero Pascual. Es la víctima que está copos; lo refiere al siglo I. Hist. ecles. siglo I, 1.” par
mandado inmolar á los judios en memoria de su salida te, c. 2, S. 13. Inst. Hist. christ., 2.” parte, c. 2,
milagrosa de Egipto. V. PascuA. S. Pablo dijo á los S. 17. Los obispos, dice, establecidos en las ciuda
cristianos que Jesucristo habia sido inmolado para des, habian fundado ya por su ministerio ó por el de
ser nuestro cordero pascual ó nuestra Pascua: l. Co los sacerdotes nuevas iglesias en las villas y lugares
rintios, c. 5, y. 7. La Iglesia repite en sus oraciones vecinos; quedaron bajo la inspeccion de los obispos,
lo que S. Juan Bantista ha dicho de Jesucristo que es de los que habian recibido el Evangelio. Pero á medi
el cordero de Dios que quita los pecados del mundo. da que se aumentó su número, formaron una especie
Joan., c. 1, y.26. de provincias eclesiásticas á las que los griegos die
ron despues el nombre de diócesis. Como el obispo de
Cordon de S. Francisco. Especie de cor la ciudad principal no podia cuidar solo de esta mul
don adornado de nudos, que llevan á la cintura dife titud de Iglesias esparcidas en las villas y aldeas, es
rentes Ordenes religiosas que reconocen por su funda tableció para instruir y gobernar estas nuevas socie
dor á S. Francisco. Los cordeleros, los capuchinos, los dades sufragáneos ó diputados, á los que dió el título
recoletos lo llevaban blanco, el de los penitentes ó de cor- episcopos, ú obispos del campo. Tenian una
picpus es negro. categoria media entre los obispos y los sacerdotes,
Tambien hay una cofradia del cordon de S. Fran eran inferiores á los primeros y superiores á los se
cisco, que comprende no solo á los religiosos, sino á las gundos. Segun esta nocion los cor-epíscopos en su
personas de uno y otro sexo. Para alcanzar las indul origen eran los pastores de segundo orden que des
gencias concedidas á su sociedad, estos cofrades eslan pues se han llamado curas, porque están destinados
obligados á decir todos los días cinco Pater-noster, por un título perpétuo á una iglesia particular; pero
cinco A ve-Marias y cinco Gloria-Patri, á llevar el parece que en la primera institucion eran mas bien
cordon que todos los religiosos pueden dar, pero que misioneros del campo que curas.
T(10).
e bendecirse sino por los superiores de la En el siglo IV pretende Mosheim que los obispos
escluyeron enteramente al pueblo de toda administra
cion en los negocios eclesiásticos; que despojaron, aun
Coré. V. AARON. á los sacerdotes de sus antiguos privilegios y de su
autoridad primitiva, con el fin de que no hubiese na
Cor—epíscopo. Se llamaba asi antiguamente un die que pudiese oponerse á su ambicion, y, con el fin
sacerdote que ejercia algunas , funciones episcopales de disponer á su antojo de los beneficios y de las ren
en los pueblos pequeños y en las aldeas; y que era tas de la Iglesia; que suprimieron los cor-episcopos en
considerado como vicario del obispo. Esta palabra se muchos puntos con el objeto de estender su propio
deriva del griego konos, region, comarca. No se poder y su jurisdicion. Siglo IV, 2." parte, capítulo 2,
habló de él en la lglesia antes del concilio de Antio S. 2 y 3.
-
 CON 523 CON
Esta objecion nos parece imaginaria. 1.° Es fue— demostrar la verdad de su pretension. Su dictámen
ra de lugar que suponga Mosheim que durante los era que esperando el hombre á los milagros se reu
tres primeros siglos el pueblo tuvo parte en la admi niese en el ínterin, que se contentase con leer á los
nistracion de los negocios eclesiásticos; está probado hombres la palabra de Dios sin comentario, y que
por las epístolas de S. Pablo, por los cánones de los cada uno la entendiese como le agradara. Creia que
apóstoles, por los de muchos concilios, por el testi se podia ser buen cristiano, sin ser miembro de nin
monio de los escritores eclesiásticos, que esta admi guna Iglesia visible. No habia, pues, necesidad de
nistracion ha estado siempre al cargo de los obispos. reunirse aun por ínterin. Los calvinistas eran á los
V. AuToRIDAD ECLEstÁSTICA, Obispo, GERARQUIA, Nc.
que mas queria. Sin la proteccion del príncipe de
2.° No hay ninguna prueba de que, durante es Orange, que le ponia á cubierto de las persecuciones,
los tres siglos, los simples sacerdotes hayan teni es probable que sus adversarios no se hubieran limi—
do mas autoridad que la que tuvieron en el cuar— tado á decirle injurias. Sin embargo no razonaba muy
to; lo contrario parece que supone el mismo Mos— mal, segun los principios generales de la reforma, y
heim, cuando dice que durante este siglo los sa no es este el único sistema absurdo á que ha dado lugar.
cerdotes y los diáconos llevaron su ambicion y sus
pretensiones al último esceso, Ibid. S8. ¿Podian los Coro. En nuestras iglesias es un espacio situado
obispos estender su autoridad al mismo tiempo que ó detras del altar, ó entre el altar y la nave, en el
los ministros inferiores trabajaban para aumentar la que se coloca el clero para cantar el oficio divino. En
suya? Si los primeros se oponian á ello, esto no prue la mayor parte de las iglesias de Italia, el coro está
ha que hayan despojado á los sacerdotes de la in— colocado detras del altar, y entonces este se halla
fluencia que habian tenido antes en los asuntos ecle aproximado á la reunion del pueblo, el que se llama
siásticos, 3." Al contrario, durante el siglo IV, fue altar á la romana. El coro en Francia está situado or
cuando los cor-epíscopos ó pastores del campo pa dinariamente entre el altar y la nave, rodeado de una
rece llegaron á ser titulares é inamovibles, cuando balaustrada ó de una pared adornada á derecha é
antes no lo habian sido. Pero la prevencion de los izquierda de dos filas de sillas, en las que se colocan
protestantes contra el gobierno gerárquico les hace los eclesiásticos y los cantores.
confundir todas las épocas, y embrollar todos los he CORO. Significa tambien la reunion de los que
chos de la Historia eclesiástica. cantan; asi el coro responde al celebrante, se canta á
Bueno es recordar que los cor—epíscopos no son lo dos coros; el alto coro son los canónigos y los sacerdo
mismo que los co-obispos ó sufragáneos. V. Co tes que ocupan las sillas mas elevadas; el coro bajo son
OBISPO. los cantores, los músicos, los niños de coro, que ocu
Corintios. De las dos cartas que S. Pablo dirige panEnlassusillas bajas.
origen
-

Koros significa una reunion formada

á los corintios, parece que les escribió la primera el
en redondo, un circo; por esto designaba una mui
año 56, cuatro años despues de su conversion, cuan titud de bailarines que se llevaban de la mano y fór—
do el apóstol estaba en Efeso. El designio de esta maban un círculo. No se debe deducir de esto como
carta era que cesasen las divisiones y los desórdenes han hecho algunos autores, que Chorus significa en
que se habian introducido entre ellos. Les escribió la las iglesias un espacio en el que se bailaba. En el li—
segunda al año siguiente para consolarlos, porque bro 2.° de Esdras, c. 12, y .31, 37,39, koRos sig
supo que la primera los habia afligido y mortificado. nifica evidentemente cantores, y no bailarines.
Cuando se recuerda el esceso de corrupcion que habia Se pretende que el coro de las iglesias no ha sido
reinado en la ciudad de Corinto en tiempo del paga
nismo, esceso atestiguado por los autores profanos y separado de la nave hasta el reinado de Constantino.
Esto únicamente significa, que no hay una prueba
que les recuerda S. Pablo, I Cor., c. 6, }. 9, se ad.
mas antigua de esta separacion. Entonces se le cercó
mira uno mucho de que en el espacio de cuatro años de una balaustrada, y de un velo ó una cortina que
el Evangelio ha ¿? entre los fieles de esta Iglesia
un cambio tan rodigioso en las costumbres, y que siglo no se corria hasta despues de la consagracion. En el
XIl se cerró con una pared, pero como esta se
hayan llegado á recibir lecciones de una moral an paracion desfigura una iglesia y quita el golpe de
pura como la del apóstol. vista de la arquitectura, se ha introducido el uso de
Cerca de 0 años despues, cuando S. Clemente de las balaustradas.
Roma les escribió para exhortarles de nuevo á la con En los monasterios de monjas el coro es una sala
cordia y á la paz, les recordó los avisos que S. Pablo unida al cuerpo de la Iglesia y de la que la separa
les habia dado en sus dos cartas.
una reja; allí es donde las religiosas cantan el oficio.
Cormaristas. Discípulos de Teodoro Cornherl, Bingham, Orig. ecles., l. 8. c. 6, S. 7, ha aprobado
secretario de los estados de Holanda, hereje entu con muchos monumentos antiguos que en los primeros
siasta. No aprobaba ninguna secta, y las atacaba á siglos el coro de las iglesias estaba reservado única
todas. Escribia y disputaba al mismo tiempo contra mente al clero; que no se permitia á los legos acercar
los católicos, contra los luteranos y calvinislas, y sos se al altar sino para hacer su ofrenda ó recibir la co
tenia que todas las comuniones tenian necesidad de munion. Este círculo se llama con frecuencia adytum,
reforma; pero añadia que sin una mision apoya lugar en que no se entra. Cuando se compara el plan
da con milagros, nadie tenia derecho de hacerla, de las antiguas basílicas con la descripcion de las reu
porque los milagros son la unica señal al alcance de niones cristianas, hecha por S. Juan en el Apocalip
todo el mundo, para probar que un hombre anuncia sis, c., y 5, se ve que esta disciplina venia de los
la verdad. Es cierto que él no hizo lo mismo para apóstoles; el emperador Juliano, aunque apóstata, la
 CON 52%) CON

respetó. S. Ambrosio no permitió al emperador Teo cristiano debe absolutamente abstenerse de llevar co
dosio colocarse en el coro de la iglesia de Milan ; la rOrl (18. - -

entrada en el santuario, sobre todo, eslaba prohibida á Barbeyrac, Tratado de la moral de los PP., c. 6,
las mugeres; los legos sin distincion debian estarse en S., se ha levantado contra esta decision, dice que,
la nave mientras los santos misterios; prueba irrecu segun el dictámen de Tertuliano, coronarse de flores
sable contra los protestantes de la distincion que ha es una cosa mala por sí misma, y contraria á la ley
habido entre los sacerdotes y los legos desde el prin natural; pero lo prueba con escasas razones; las
cipio del cristianismo, y de la idea que iba unida al principales son que la Sagrada Escritura no permite
sacrificio augusto de los altares. , , en ninguna parte este uso, y que la naturaleza ha
Pero luego que los bárbaros se hicieron dueños del criado las flores para agradar al olfato, y no para
Occidente, introdujeron en la religion su carácter al adornar la cabeza. La primera, dice Barbeyrac, es
tivo, guerrero y feroz: entraron en las iglesias con las un principio falso, y la segunda un desvario de una
armas que no dejaban nunca; ocuparon el lugar del imaginacion desarreglada. Esta crítica es falsa á lo
clero, y no respetaron ninguna ley. Los poseedores das luces.
de los mas pequeños feudos siguieron el ejemplo de 1.º El pretendido desvario de Tertuliano prueba
los príncipes, y pretendieron el mismo privilegio; un ya que las coronas son una cosa supérflua, que se
asiento en el coro llegó á ser un derecho señorial. To usa de ellas no por necesidad, sino por alguna otra
davia en la actualidad un señor de parroquia no se razon, y es necesario examinar los motivos por qué
contenta con ocuparlo él, sino que su muger, sus hi se llevan; esto es lo que ha hecho Tertuliano en todo
jos, sus lacayos, sus criados tienen la impudencia de el discurso de este tratado. Despues de haber bus—
colecarse en él; y si los pastores se opusieran á ello, se cado en los autores profanos el origen y los motivos
les condenaria en todos los tribunales. de todas las clases de coronas, manifiesta que nin
Los obispos de la primitiva Iglesia, los discípulos guno de ellos es laudable. Las que llevaban los mi
de los apóstoles se admirarian mucho si volviesen al nistros de un sacrificio y los asistentes eran una pro
mundo, y viesen en los dias mas solemnes el santua fesion de idolatria; las de los convidados de un festin
rio de las iglesias ocupado por soldados armados, anuncian la intemperancia y la disolucion; las de los
que se conducen en él poco menos que en un campo, triunfadores victoriosos participaban, por decirlo asi,
como si fuesen hacer la guerra á Dios; los legos y las de la carniceria y de la sangre derramada; las de los
mugeres oproximarse al altar santo con tan poco res esposos eran las libreas de los dioses del himeneo.
pelo como á una mesa profana, y solocar los senti Observa que no hubo ninguna flor, ninguna hoja, nin
mientos de religion por orgullo y por curiosidad. guna planta que no se consagrase á alguna divinidad
«Temblad de respeto á la vista de mi santuario, yo y que no fuese el simbolo de su culto. De Corona c. 8.
soy el Señor.» Levit., c. 26, y. 2. No se acuerdan ya Todas las cosas son puras como criaturas de Dios, y
de esta leccion. que están destinadas para nuestro uso; pero la na
Entre las cartas de Juliano hay una dirigida á turaleza de este uso es la que decide si es bueno ó
Arsacio, soberano pontífice de Galacia, que es una malo, c. 10. No es, pues, cierto que Tertuliano con—
censura palpitante de nuestras costumbres. «Cuando dene las coronas absolutamente en sí mismas como
los gobernadores, les dice, vengan al templo, se sal contrarias á la ley natural, sino como señales de ido
dráá recibirlos al vestíbulo. Que no se hagan acom latria. Hé aquí por qué los cristianos se abstienen de
pañar de soldados sino que vayan libres para el que ellas; esto es lo que les ha echado en cara un pagano
quiera seguirlos. Desde ¿ ponen los pies en el tem— en Minucio-Felix. Octav., c. 12.
plo, no son mas que simples particulares. Vos solo te Hemos detallado, continúa Tertuliano. c. 13, to
heis el derecho de mandar alli, puesto que los dioses das las causas por las que se llevan coronas; todas
lo disponen asi, Los que se someten á esta ley mani son agenas de un cristiano, profanas, criminales, con
fiestan que verdaderamente tienen religion, los que trarias á los juramentos del bautismo; son las pom
no quieren despojarse un momento de su fausto y de pas del demonio y de sus ángeles, todas están infes—
sus grandezas son hombres soberbios llenos de una tadas de idolatria, iu omnibus istis idolatria Un cris
loca vanidad.» Carta 49. tiano no querrá ni aun adornar con el laurel la puer
No hacemos esta observacion CenStl Tar nueS— ta de su casa, porque sabe á cuántas divinidades
tras leyes civiles; sabemos que han sido obra de las ha encargado el demonio del paganismo la custodia
circunstancias, y muchas veces de la necesidad que de las puertas, Jano, Limentino, Forculo, Car—
es la mas fuerte de las leyes; pero siempre es útil re da etc. «Presumimos que Tertuliano conoceria mejor
comendar la memoria de la antigua disciplina, por que un crítico del siglo XVIII las ideas, las costum
que es un monumento de la creencia primitiva. bres, las locas alusiones, los absurdos del paganis
CORO DE ANGELES. V. ANGEL. mo y las consecuencias que los paganos sacaban de
sus prácticas. Aunque hubiese llevado demasiado allá
Corona. Se ha vituperado con mucha acritud á el escrúpulo y las sospechas de idolatria, , todavia
los PP. de la Iglesia, que han delendido que no con no se deduciria que raciocina mal; en el fondo si
venia á un cristiano coronarse de flores como lo ve ue la regla señalada por S. Pablo, Rom., c. 14,
rificaban los paganos en sus festines y en algunas de .20. «Todas las cosas son puras, pero un hombre
sus ceremonias; esta censura recae sobre Minucio hace mal uso de ellas cuando escandaliza á los de
Felix, sobre S. Cemente de Alejandria, y princi mas.» I. Cor.; c. 8, y . 13. «Si mi alimento escan
palmente sobre Tertuliano. Este Padre ha compuesto daliza á mi hermano no comeré carne en toda mi
n libro De Corona, en el que procura probar que un vida.» -
 CON 323 CON
2." Barbeyrac no ha considerado que, condenando -esta fiesta una octava, con el mandato de llevar pú
el argumento negativo que Tertulianó saca del silen blicamente el Santísimo Sacramento en procesion.
cio de la Sagrada Escritura, forma el proceso al pro Esta fiesta se ejecuta con toda la pompa y decen
testantismo. Este Padre decia: El uso de las coro cia posibles; los errores de los calvinistas han escita—
nas no se halla espresamente aprobado ni permiti do á los católicos á aumentar todavia el esplendor
tido por la Escritura; luego está prohibido. Con de esta solemnidad. En este dia las calles estan ta—
tinuamente repiten los protestantes: tal dogma no pizadas y cubiertas de flores; todo el clero marcha
se halla espresamente enseñado por la Escritura; lue en orden, revestido de los mas ricos ornamentos. El
go no está revelado: tal práctica no se halla en ella es Santísimo Sacramento es llevado debajo de un palio;
presamente autorizada; luego es un abuso. ¿Qué di de trecho en trecho hay capillas ó descansos muy
ferencia hay entre este argumento y el de Tertulia adornados; en los que se hace una parada que ter—
no? Nosotros no lo aprobamos absolutamente; pero mina con la bendicion del Santísimo Sacramento. Se
no son ellos los que lo han de vituperar. Tertuliano da lambien todos los dias en la misa mayor y por la
añadia ademas otra prueba, que el uso de las co tarde en la bendicion sacramental durante la octava.
ronas no estaba tampoco autorizado por la tradicion; En las ciudades de guerra, la guarnicion sobre las
al contrario, se hallaba proscrito por el uso de los armas, forma en filas en las calles. El Santisimo Sa
buenos cristianos, de lo que deducia que debian abs cramento va precedido de la música eclesiástica y
tenerse de él, y tenia razon ; pero esta autoridad que militar, y saludado con las descargas de la artilleria.
Tertuliano atribuye á la tradicion irrita á los proles En Versailles el rey con toda la corte asiste á la proce
tantes y no se la perdonarán jamas. - sion. En la mayor parte de las ciudades hay durante
esta octava, sermones destinados á confirmar la fé de
Corporal. Lienzo sagrado que se estiende deba los fieles sobre el misterio de la Eucaristía. En
jo del caliz durante la misa para poner en él decen Angers esta procesion, que se llama el sacrum, se
temente el cuerpo de Jesucristo; sirve tambien para hace con mucha magnificencia, y atrae un gran
recoger las partículas de la hostia que pueden haberse concurso del pueblo de los alrededores y de estran
separado, cuando la parte el sacerdote, ó cuando jeros. Se cree que se estableció allí el año de 1019,
conulga. Algunos atribuyen el uso primero del cor para dar una honrosa satisfaccion á Jesucristo con
poral al papa Eusebio, otros á S. Silvestre. En cuan tra los errores de Berenger, arcediano de esta ciu
to al regalo hecho por el papa á Luis XI, de un cor dad y precursor de los sacramentarios.
poral sobre el que S. Pedro habia dicho la misa, no
nay obligacion de creer á Felipe de Comines. Anti Corruptícolas. Secta de eutiquianos que apa
guamente se acostumbraba llevar los corporales á los reció en Egipto hácia el año 521, y que tuvo por ge
incendios y presentarlos á las llamas para apagarlas; fe á Severo, falso patriarca de Alejandria. Sostenia
esta práctica ha sido prohibida, y con razon, en la que el cuerpo de Jesucristo era corruptible; que el
mayor parte de las diócesis. Véase el antiguo sacra negar esta verdad era atacar la realidad de los pade
mentario por Grandcolas, primera parte, pag. 156 y cimientos del Salvador. Por otro lado Juliano de Ila
730. Lebrun, t. 2, pag. 297. licarnaso, otro eutiquiano refugiado en Egipto, pre
tendia que el cuerpó de Jesucristo ha sido siempre
Corpus. Dia solemne instituido para tributar un incorruptible; que el sostener lo contrario era admi
culto particular á Jesucristo en la sagrada Eucaristia. tir una distincion entre Jesucristo y el Verbo, por
La Iglesia ha celebrado siempre el aniversario de consiguiente, suponer dos naturalezas en Jesucristo,
la institucion de este sacramento el jueves de la se— dogma que Eutiques habia combatido con todas sus
mana santa; pero como los oficios y las ceremonias fuerzas.
lúgubres de la misma no permiten honrar este mis Los secuaces de Severo se llamaron corrupticolas,
terio con toda la solemnidad conveniente, se ha crei ó adoradores del corruptible; los de Juliano fueron
do á propósito establecer una fiesta particular, fija llamados incorruptibles ófantasíastas. En esta dispu
ta, que dividió á la ciudad de Alejandria, el clero y
da el jueves despues del domingo de la Santísima Tri
nidad. las potestades seculares favorecian al primer partido,
El papa Urbano IV, francés, que nació en la dió— los monges y el pueblo se inclinaron al segundo.
cesis de Troyes, fue el que en el año 126 insti
tuyó esta solemnidad para toda la Iglesia. Estaba ya Cosme (Sara). Los canónigos regulares de S. Cos
establecida en la diócesis de Lieja, en la que Urba me-les-tours abandonaron, segun se dice, la regla
no habia sido arcediano antes de ser elevado á so muy austera de San Benito por abrazar la de San
berano pontífice. Escitó á Sto. Tomas de Aquino Agustin, no se sabe en qué tiempo.
para que compusiese para un oficio muy
bueno y , piadoso. El designio de este pontífice no Cosmogonia. V. MUNDo.
tuvo desde luego todo elécsito que esperaba, porque
entonces estaba agitada la Italia por las facciones de Costa de oro. Los sacerdotes en la costa de
los güelfos y de los gibelinos; pero en el concilio Guinea son engañadores llenos de hipocresía, todos
general de Viena, celebrado en 1311 , bajo Clemen son májicos, se les corrompe con mucha facilidad.
te V, la bula de Urbano IV fue confirmada en pre Ellos son los que sostienen á los naturales en la su
sencia de los reyes de Francia, de Inglaterra y persticion mas grosera. Cada familia tiene su gran
Aragon, y se mandó su ejecucion en toda la Iglesia. fetiche independiente del gran fetiche, especie de Dios
El año de 1316 el ponlífice Juan XXII añadió á público, al que se le rinden todos los años homenajes
TOMO I, 72
 CON 526) CON
úblicos. Los habitantes de la costa de oro entierran
OS muertoS en SuS CaSaS.
La revelacion dada á los hebreos por medio de
Moisés presenta una segunda época, en la que en
Costumbre religiosa ó eclesiástica. contramos el mismo fenómeno con respecto álas cos
V. oBSERVANCIA. tumbres. El cuadro que ha trazado el abad Fleury de
las de los israelitas es muy diferente del que habia
Costumbres. Una de las. ¿ con en las naciones idólatras, y de la pintura que el mis
mas terquedad han defendido los ¿? (2 ¿ mo Moisés ha hecho de la corrupción de los cananeos.
tros dias, es que la religion no contribuye en ¿ los Nº se puede, no obstante, acusará este legislador de
la purezanoinfluyen
hombres de costumbres, que modo
de ningun las opiniones
en COn ducta haber ecsajerado su crímenes para dará su nacio
º

En este caso no sabemos por qué los filósofos e— un preesto de esterminarlos; esta sospecha avent
rada, por los incrédulos está demostrado ser asa.
vados con tanto ardor á enseñar lo que ellos llaman En electo, Moisés advirtió á su pueblo que caeria en
la verdad. Si las y los º no ¿ los mismos desórdenes, siempre que se asociase con
en nada para arreglar la conducta, ¿qué ¿ d
saber si los hombres son creyentes ó ¿ os, estas naciones; y el resultado de los acontecimientos
no ha hecho mas que confirmar demasiados pre
cristianos ó ateos?
icar la impiedad.
º es ensenar la religion diccion. Cuando ha sucedido esta desgracia, los pro
º "¿ad de su ¿
-

e elas siempre han echado en cara á los israelias que

sus desórdenes eran efecto del ejemplo que les ha
comparar las costumbres que han tenido ¿- bian dado sus vecinos, y del furor con que los habian
versas edades del mundo los adoradores del ver ade imitado. Asi, aun las declamaciones que han hecho
ro Dios con las de las naciones entregadas al ¿ ¿ los incrédulos sobre los vicios enormes de los judios
mo y á la idolatría. El libro del Génesis y e ¿ 0 son una prueba de la depravacion de los idólatras,
SOn is únicos que ¿º alguna luz sobre es
le ¿? bastante ¿º
que hayantigua, porque los judios no los habian adquirido mas que
e la historia ,, -
or imilacion, pues todos estos desórdenes es esa
costumbres de los patriarcas y las que la ¿ara S severamente prohibidos por sus leyes. El autor
del libro de la Sabiduria observa, con razon, que la
critura nos manifiesta de los egipcios y de los ¿ idolatria era la fuente y el depósito de todos los Críme
neos. Abraham se hizo venerable entre ¿ 10 nes. (Sap., c. 14, y. 23.)
por sus yriquezas
dulzura y, prosperidad,
regularidad de sus costumbres, ¿a ello,L0sleyendo
sino tambienSUlpor que dudasen de esto pueden convencerse de
lo ue los autores profanos han dicho de
ticia, sn desinterés, su humanidad hácia los S las costumbres ¿ las diferentes naciones conocidas
ños, su fidelidad en guardar su palabra, pº n en la época del nacimiento del cristianismo. Los apo
peto y sumision á la divinidad. Vemos mas l in logistas de nuestra religion no han dejado de reunir
su familia que
a
¿ la de Laban, que principiaba
l Doliteismo. eslas pruebas para demostrar la necesidad que habia
de una reforma en las costumbres de todos los pue—
º ¿ ¿ señala crímenes en ella, pero
mucho menos frecuentes; si los hijos de Jacob parece
blos cuando Jesucristo vino al mundo. Íos poetas,
los historiadores, los filósofos , todos han contribui
que la
que mayor yparte
nacieron han sido
habian de mal ¿
sido educados ie
en la a ld
do, sin quererlo, á recargar las pinceladas de este
cuadro.
Laban. enLosEgipto
vieron ejemplos de depravacion
no eran los mas á ¿¿º
¿? S US
Es, sobre todo, en esta tercera época de la revelacion
en donde la influencia de la religion sobre las co¿
ra que guardasen fieles las antiguas virtudes de s bres ha sido palpable por la revolucion que el cristia
"aumen muchos crímenes comunes de nismo ha producido en las leyes, las costumbres, los
hábitos de los diversos pueblos del mundo. Si no hu
meos entre los que él vivia, y que adoraban e biera sido necesario refundir en algun modo la hu
9

la luna, y se felicita de haber sabido ¿e

ellos, c. 31. Las historias de los ¿. e ¿ manidad para establecer el Evangelio, sus primeros
predicadores no hubieran hallado tanta resistencia.
dios, de los griegos y de los romanos, todas ¿? Nº dirigiremos á los incrédulos ni al testimonio de
en pintarnos,
das lassumidas
de salvajes, primerasen poblaciones
la ¿ º "ad los PP. de la Iglesia, ni á las refecsiones de Bossuet
como
en sus discursos sobre la historia universal, ni al libro
barbarie y que ha sido necesario ¿ ¿l- del abad Fleury, sobre las costumbres de los cristianos;
mente; se sabe cuáles son las costumbres de los nom ºsos títulos les serán sospechosos. Pero recusarán a
*

bres en este estado tan deplorable. Nunca se v¿ deposicion de los mismos enemigos de nuestra reli
reducidas á él las familias patriarcales; Dios l gion, de Plinio el jóven, de Celso, del Emperador
provisto á esto concediendo muchos siglos de -

Antonino, de Juliano, de Luciano, etc.; y el testimo

los gefes de estas familias: tenían por eSle aa nio que se han visto obligados á dar de la pureza de
ventaja de ¿ SUS (162SCe
las cºstumbres, de la inocencia de conducta de los que
ientes hasta la 12.° Ó 8, º
la habian abrazado?
dº objetará que, segun
antiguos pueblos conocian sin embaº º ¿ W0 (1 d(10"
Plinio en su célebre carta á Trajano, (l. 10, carta
97) alestigua que ya por la confesion de los crista
Dios y le adoraban, puesto que el no nos que habia puesto en tormento, ya por la declara
la religion primitiva. Sin duda que lo ¿ condelosque han apostatado, no ha descubierto nada,
º

pero no vemos ninguna que lo adorase solo como sino que los cristianos se reunían en secretó para hon
hacian los patriarcas. V. Dios. S. 5. rará Cristo como un Dios; que se obligaban con ju
 • COS 527) COS
ramento no á cometer crímenes, sino á abstenerse del que se les ofrecian? De modo que el culto que se les
robo y del latrocinio, del adulterio, de faltará su tributaba era meramente esterior y mercenario. Se
palabra; de negar un depósito; que tomaban juntos pedia á los dioses, la salud , las riquezas, la prospe—
una comida inocente, y que habian cesado sus reu ridad, la esencion de toda desgracia, y muchas veces
niones desde que se habian prohibido por un edicto. el medio de satisfacer una pasion criminal. Los filó-.
Celso confiesa que habia entre los cristianos hom sofos habian establecido que la sabiduria, y la virtud
bres moderados, temperantes, sabios, inteligentes; no son un don de la divinidad, sino una ventaja que
no les echa en cara otro crimen qne el de rehusar ado el hombre mismo puede procurarse. Los votos ín
rar los dioses, de reunirse contra las leyes, de que justos, la impudicicia, la adivinacion, los augurios,
rer persuadir con su doctrina á los jóvenes y á los a magia, la efusion de sangre humana hacian parte
ignorantes. de la religion. Esta, lejos de arreglar las costumbres,
El emperador Antonino, en su rescripto á los es era al contrario la obra de la depravacion de las cos
tados de Asia, echa en cara á los paganos obstina tumbres. Véase PAGANismo, S. 6.
dos el perseguir á los cristianos; que estos hombres El Evangelio enseña á los hombres que un solo
cuya muerte piden, son mas virtuosos que ellos; hace Dios infinitamente santo, justo y sabio gobierna solo
justicia á la inocencia, al carácter pacífico, al valor el mundo, y que lo ha criado con su palabra; que es
de los cristianos; prohibe darles la muerte por causa incapaz de dejar impune el crimen, y la virtud SI)
de religion. San Justino, Apol. l., n. 69, 70; Eu— recompensa; que sondea los entendimientos y los co
sebio, Hist. eccles., l. , c. 13. Entre los diferentes razones; que vé no soio todas nuestras acciones, sino
edictos que se dieron contra los cristianos por los em nuestros pensamientos y nuestros deseos; que su culto
peradores siguientes ¿hay uno solo que los acuse de no consiste en vanas ceremonias, sino en los senti
algun delito? Todavia no se ha ¿ citar ninguno. mientos de respeto, de reconocimiento, de amor, de
Aun hay mas; Juliano se ha visto obligado á hacer confianza, de sumision á sus leyes, de resignacioná
su elogio en muchas de sus cartas. Acusa á los paga sus órdenes; que quiere que le amemos sobre todas
nos de ser menos caritativos, y menos virtuosos que las cosas y al prójimo como á nosotros mismos. En
los galileos. Dice que su ¿? la han acreditado seña que la caridad es la mas sublime de todas las
en el mundo por la hospitalidad, por el cuidado de virtudes; que un vaso de agua dado en nombre de
enterrar los muertos, por una vida arreglada, por la Jesucristo no quedará sin recompensa; que es nece
apariencia de todas las virtudes. «Es vergonzoso, sario bendecir la providencia en las aflicciones, por
dice, que los impíos galileos, ademas de ser pobres, que estas, expian el pecado, reprimen las pasiones,
alimenten á los nuestros, que dejamos que carezcan purifican la virtud, nos hacen sensibles á los pade
de todo». Hubiera querido introducir entre los sacer cimientos de nuestros semejantes; que ¿ ser agra
doles paganos la misma disciplina y la misma regu dable á Dios es necesario no solo hallarse libre de
laridad de conducta que habia entre los sacerdotes pecado, sino adornado de todas las virtudes, y que
del cristianismo. Carta 32 á Ars., etc. Dios es el que nos hace virtuosos con su gracia.
Luciano, en su Historia de la muerte del Peregrino, Desde este momento cesó el mirar á los pobres co
hace justicia á la caridad, á la fraternidad, al valor, mo objeto de la ira divina, y se aprendió que era un
á la inocencia de las costumbres de los cristianos. «De deber el socorrerlos. Ya no hubo distincion entre un
sechan constantemente, dice, los dioses de los grie griego y un bárbaro, entre un romano y un estran
gos; no adoran mas que aquel sofista que fue cruci— jero, entre un judio y un gentil. Todos reunidos al
ficado; arreºlan sus costumbres y su conducta á sus pie de un mismo altar, admitidos á una misma co
leyes; desprecian los bienes de la tierra, y los ponen munion, honrados con el mismo título de hijos de
CIl C0 Ilull». Dios conocieron que eran hermanos. Entonces em
Entre los fragmentos que nos quedan de los escri pezó á brillar el heroismo de la caridad; en las cala
tos de Porfirio, de Hierocles, de Jamblico y de otros midades públicas se vió á los cristianos entregarse á
filósofos enemigos del cristianismo, y en todo lo que aliviar á los enfermos, los leprosos, los apestados, sin
han dicho los PP. de la Iglesia no hallamos nada que distincion entre los fieles y los infieles; se vió que
manifieste que estos filósofos han vituperado las cos vendieron su libertad para rescatar la de otro. S. Cle
tumbres de los cristianos: no les echan en cara mas mente, Epist. 1, n. 7. - -

que su aversion al culto de los dioses del paganismo. En el paganismo la condicion de los esclavos era
¿Habia, pues, algun atractivo mas que el de la vir poco mas ó menos la misma que la de las bestias de
tud, que pudiese escitar á un pagano á abrazar el carga; cuando fueron bautizados se recordó que eran
cristianismo? Si se º. comparar el genio, la creen hombres y que habia inhumanidad en tratarlos como
cia, las prácticas del paganismo con el Evangelio, brutos; que no habian nacido para entretener con el
se conocerá que para cambiar de religion era nece espectáculo de su muerte las miradas de un pueblo
sario que se verificase el cambio mas grande en el reunido en el anfiteatro, ni para perecer por el ham
enlendimiento y en el corazon de un convertido. Qué bre, aun cuando fuesen viejos ó estuviesen enfermos.
funestos efectos no debia producir en las costumbres La poligamia y el divorcio fueron reprimidas ó
una religion que enseñaba á los paganos que el mun proscritas; se pusó límites al poder paternal; la suer
do estaba gobernado por una multitud de genios vi— ie de los hijos se aseguró; no se permitió ya el ma
ciosos, estravagantes, caprichosos, poco acordes en tarlos, el venderlos, el esponerlos y destinarlos unos
tre sí, con frecuencia enemigos declarados, que no á la esclavitud y otros á la prostitucion., . .
pedian á los hombres ninguna cuenta de las virtudes El despotismo de los emperadores habia sido lleva
morales, sino únicamente el incienso y las víctimas do hasta el último esceso; apenas se hizo cristiano
 COS 528 COS
Constantino, cuando le reprimió por las leyes; las virtudes morales, no es mas que un sofisma pueril.
guerras civiles, casi inevitables á cada mudanza de Estos incrédulos han sido criados desde su niñez, ins
reinado, no se repitieron mas; los emperadores no fue truidos y formados en una sociedad que cree en Dios;
ron asesinados, ni las provincias entregadas al pilla se han visto obligados á seguir la marcha de las cos
je de los ejércitos. «Debemos al eristianismo, dice tumbres públicas, la moral de que hacen ostentacion,
ontesquieu, en el gobierno un cierto derecho políti y cuyos autores se creen, es en verdad obra de la re
co; en la guerra un cierto derecho de gentes, que la ligion. ¿La habrian recibido si hubiesen, nacido en
naturaleza humana no sabrá reconocer bastante». Es una nacion que no tuviese ni Dios, ni culto público,
prit. des lois, l. 2, c. 3, Añadamos que le somos deu ni moral popular? Cualquiera nacion que se hallase
dores en la sociedad civil de una dulzura en el trato, en este caso seria salvaje, bárbara, sin leyes, sin
de una confianza mútua, una decencia y una libertad principios y sin costumbres: se dice que hay una de
que no se encuentran en ninguna otra parte, y de la esta especie en las Indias; pero se añade que son mas
que no conocemos su valor sino cuando compáramos bien brutos que hombres.
nuestras costumbres con las de las naciones in— No se discurre mejor cuando se insiste sobre la
fieles. multitud de cristianos, cuya conducta es diamelral
Esta revolucion no se ha hecho entre una ó dos na mente opuesta á la moral del Evangelio; de esto úni
ciones, sino en todos los climas, en la Grecia y en la camente se deduce que la violencia de las pasiones
Italia, en las costas y en el interior del Afria, en impide á la religion influir en las costumbres de los
Egipto y en la Arabia, entre los persas y entre los individuos tan constantemente como debia de hacer
scitas, en las Galias y en la Germania; en todos los lo. Como no hay ningun hombre que esté dominado
puntos donde el cristianismo se ha establecido, tarde por todas las pasiones, tampoco hay ninguno en el
ó temprano ha producido los mismos efectos. que la religion no tenga algun imperio: la sigue él
Se dirá sin duda que este fenómeno no ha sido mas mismo sin advertirlo, cuando no es arrastrado por
que pasajero, que insensiblemente las naciones cris la violencia de las pasiones. Nunca hay motivo para
tianas han vuelto á caer poco mas ó menos en el mis deducir que la religión no influye nada en las costum
mo estado que se hallaban bajo el paganismo. En esto bres generales de una nacion; al contrario, está de—
es en lo que no convendremos nunca, digan lo que mostrado por los hechos que no hay en la tierra nin
quieran álgunos moralistas atrabiliarios, que no se gun pueblo cuyas costumbres generales sean me
han tomado el trabajo de ecsaminar de cerca las cos jores, ni aun tan buenas como las de las naciones
tumbres de los paganos antiguos ó modernos. cristianas. -

Convenimos en que la inundacion de los bárbaros Para saber lo que hay en esto no es necesario con -
en el siglo V y en los siguientes hizo una revolucion sultar á los filósofos que han soñado en su gabinete,
funesta en la religion y en las costumbres. Pero en fin
y que por necesidad de sistema están interesados en
el cristianismo suavizó poco á poco á estos feroces negar los hechos mas incontestables; deben leerse
conquistadores; y cuando pasó aquella tempestad, que las relaciones de los viajeros que han dado la vuelta
duró muchos siglos, esta misma religion ha reparado al mundo, que han frecuentado y observado un gran
insensiblemente los estragos que habia causado. Los número de naciones. Todos han esperimentado la di
scitas ó tártaros, que esparcidos en Oriente abraza ferencia enorme que hay entre las costumbres de unas
ron el mahometismo , han conservado su ignorancia y de otras, y de ello dan testimonio. En un pueblo
y su ferocidad. Los francos, los borgoñones, los go. infiel, un estrangero se halla siempre con desconfian—
dos , los normandos, los lombardos no tenian en su za, en peligro su equipaje y su vida, entregado
origen mejores costumbres que los bárbaros; las han á merced de un guia ó de un poderoso; si llega á
mudado haciéndose cristianos. los paises cristianos, aunque fuese al cabo del mun
Como no se puede juzgar del bien y del mal sino do, halla la seguridad, la sociedad, la libertad;
por comparacion, es necesario empezar por hacer el cree hallarse de vuelta en su patria. V. CRist ANismo,
paralelo de nuestras costumbres con las de todas las MoRAL. -

naciones que todavia estan sumidas en la infidelidad; * Para conocer bien cuál ha sido la influencia
l"d ¿ leer el espíritu de los usos y costum del cristianismo en las costumbres sociales es necesa
res de los diferentes pueblos. Cuando un filósofo esté
rio mirar por un lado la opresion de todas las debili—
bien instruido de esto, le suplicaremos que nos diga dades de la humanidad en las sociedades paganas, la
en cuál de todas las naciones querria vivir mejor que del sexo por la poligamia, el divorcio, la prostitucion
en medio del cristianismo. Muchas de las que en el religiosa; la de la edad por la esposicion y la muerte
dia son semi-bárbaras eran en otro tiempo cristianas; de los niños: la de la condicion por la esclavitud, los
perdiendo su religion volvieron á caer en la ignoran juegos sangrientos, los sacrificios humanos, y por otro
cia y en la corrupcion que la luz del Evangelio habia el cristianismo destruyendo todas estas opresiones y
disipado en otro tiempo. A pesar de este hecho incon rehabilitando todas estas debilidades. En la nocion
testable se nos dice con mucha gravedad que la reli del origen y de los destinos comunes de la humanidad
gion no influye nada en las costumbres, ni en la suerte es donde tienen su raiz las verdaderas nociones del
de los pueblos, ni lampoco en la de los individuos; derecho, y solo el cristianismo dáá conocer bien es—
algunos incrédulos han llevado la demencia hasta sos—. te origen y estos destinos. En lugar del derecho, so
tener que el cristianismo mas bien ha pervertido que lo puede el hombre poner la fuerza; y la legislacion
reformado las costumbres. impuesta á la debilidad por la fuerza, ha sido y lo es
Cuando se nos opone el egemplo de algunos filóso— aun en efecto la de todos los pueblos no cristianos.
los sin relision, que han tenido no obstante todas las Aparece el cristianismo, y queda comprendida la
- COS 529) COS
dignidad del hombre, destruidas todas las opresiones, fue el poner mas trabas al divorcio; pero la esclavitud
todas las debilidades rehabilitadas. de la muger se hace sentir, aun en sus leyes, obligada
La cuestion propuesta exige un cuadro compara— como estaba en aquella remota antigüedad á sufrir el
tivo de las principales especies de opresion en las so poder de las costumbres generales, ya demasiado
ciedades paganas, y la obra de rehabilitacion des corrompidas para que la indisolubilidad del matrimo
empeñada por el cristianismo. Este cuadro necesita nio fuese practicable.
largos detalles; es un pequeño bosquejo que ensaya Herodoto refiere que en Babilonia las mugeres es
remos dar: taban obligadas á prostituirse á los estranjeros en el
1." Cºpresion del searo. En el reinado casi esclu templo de My!lita ó de Venus. Lo mismo asegura
sivo de la fuerza, la muger, débil por naturaleza, no Strabon. El mismo profela Jeremias, escribiendo á los
ha podido ser mas que un instrumento de viles tra judios de Babilonia, los previene contra este desór—
bajos y de pasiones brutales, y la libertad de to den. Luciano dice que en Belbos, en Egipto, durante
marla y abandonarla á su voluntad necesariamente la fiesta lúgubre de Adonis, las mugeres que no que
ha debido formar parte de las costumbres públicas, y rian cortarse sus cabellos estaban obligadas á pros—
hallarse fuera del alcance de las leyes cuando no tituirse á los estranjeros. Justino atribuye la misma
haya tenido su sancion. Dotada de un gran fondo infamia á las mugeres de Chipre en honor de Venus.
de sentimiento, y casi incapaz de grandes pensamien Valerio Máximo dice que reinaba la misma costum
tos, si profundas convicciones no llegan á contener bre en Sila, en Africa; S. Agustin la atribuye tam
sus pasiones y darles una direccion saludable, puri bien á las mugeres de Fenicia.
ficándolas, espantará al mismo vicio con su deprava Todos estos escesos estaban autorizados por el
cion, como bajo la influencia de una legislacion san— ejemplo de los dioses; Venus y Cupido tenian templos
ta realiza los prodigios de decision y de caridad. enGrecia y en Roma, Los infames amores delincestuoso
¿Qué debia, pues, ser la muger pagana? ¿Qué se po— Júpiter eran cantados por los poelas, y el cincel del
dia hallar en ella de apreciable? Así, los escritos de escultor grababa en el mármol el robo de Proserpina
los sábios de la antiguedad y de los legisladores estan y los incestos del padre de los dioses.
llenos de máximas sobre su perversidad natural, y en Cuando se anunció el Evangelio sobre la tierra, to
su consecuencia la legislacion ha sido opresora y das estas infamias y todas eslas opresiones desapare
llena de precauciones contra ella. La opresion de la cieron. La muger ocupó en la familia el puesto que la
muger era, pues, una consecuencia necesaria del misma naturaleza le habia determinado; vino á ser
estado de las creencias y de las costumbres paganas; la ayuda y compañera del hombre; la proteccion ne
y en efecto, en todas partes bajo el paganismo ha cesaria á su debilidad le fue asegurada con el honor.
pesado una triple opresion, y aun pesa sobre ella la La accion penetrante del cristianismo dirije y en
poligamia, el divorcio y la prostitucion religiosa. grandece sus facultades morales, y el triunfo mas
Está recibido en la China el vender ó alquilar las bello de la ley de amor sobre la tierra está quizás
mugeres; en el Africa su suerte es poco más ó me— en la fuerza con que el sexo débil, restituido á la li
nos semejante á la de los negros de nuestras colonias; bertad y á la felicidad por esta ley, triunfa él mismo
en Turquía la mayor parte son esclavas compradas de su debilidad, y en cambio de los beneficios que
en el mercado y encerradas en un serrallo como en ha recibido de la religion, la crea por las maravillas
una cárcel, muertas á puñaladas ó degolladas á la de decision y de caridad que obra una de sus mas
mas leve sospecha de infidelidad; en Atenas y en hermosas glorias. -

Roma en los primeros tiempos no eran mas que bes 2." Hijos. El famoso legislador de Esparta oga
lias de carga. La poligamia ha sido admitida en lo nizó el asesinato legal; estableció jueces que decidie
dos los pueblos, y esto debia suceder; la unidad del sen de la suerte de los hijos de la república, y todos los
matrimonio supone en la muger un valor personal que nacian con alguna deformidad natural eran arro
que ella no tenia. Pero ¿ de cuántos tormentos do jados en un horroroso precipicio á los pies del monte
mésticos no es orígen la poligamia ? Taijeto. Este destino, sobre todo, estaba reservado
El divorcio introduce la anarquía en la sociedad para las niñas que se las sacrificaba sin el menor es—
doméstica, destruye la familia. La facilidad de las crúpulo. El mismo Rómulo, al prescribir que se cria
separaciones impide la confianza mútua, exaspera las se á los niños con cuidado, no aseguró la vida á las
disputas mas minuciosas, y aun la madre llega á ser niñas sino hasta los tres años; á esta edad los pa
un objeto de desprecio para sus hijos. En efecto, ¿qué dres las podian, hacer perecer sin que nadie se ocu
consideraciones, qué respetos puede esperar de sus pase de ello en la mas mínima cosa. Entre los roma
hijos la madre que de un dia á otro puede ser nos, no solo las leyes permitian esponer á los niños,
arrojada ignominiosamente del hogar doméstico?..... sino que autorizaban el aborto y el asesinato. Segun
Tanto el divorcio como la poligamia, del que no es refiere Suetonio, Augusto mandó que el niño que te
mas que su peor especie, son una necesidad en el nia en el vientre su hija Julia, fuese ahogado tan pronto
paganismo, y en todas partes son sus resultados. En como la madre lo diese á luz. Los chinos los sofocan,
los últimos tiempos de la república romana, nada era los ahogan, los arrojan á las calles públicas; y si no
mas frecuente que el divorcio. Se veian comunmente son devorados por los animales, se les echa á la maña
en Roma señoras de la primera condicion repudiadas na en el carro con el estiercol y las inmundicias. En
muchas veces por diferentes maridos, Séneca nos en América cuando una madre que cria su hijo llega á
seña que habia mugeres que no contaban sus años por morir, se le entierra con ella para dispensarse el ali
los nombres de los cónsules, sino por el de sus mari mentarlo. Aun en el dia una abominable supersticion
dos. Todo lo que ha podido hacer el mismo Moisés, condena en la India una multitud de niños á una
 COS 1590 COS
muerte cruel. En una provincia, de la presidencia de una isla del Tiber. Tal era la condicion de los escla
Madras los cultivadores tienen la horrible costumbre vos en las sociedades paganas.
de alimentarlos bien para matarlos despues y abonar El hombre, bajo el antiguo paganismo, habia lle—
con ellos sus campos. - - gado á ser tan despreciable á los ojos del hombre, que
Luego que el Evangelio proclamó la dignidad del se le mataba para divertirá un infame populacho.
niño, las leyes sobre la autoridad paternal debieron Roma tenia establecimientos en los que se alimentaba
cambiar. El padre pagano era un señor, el padre con carne humana á los animales feroces para hacer
cristiano no es mas que un depositario; el niño paga los todavia mas feroces, contra los desgraciados que
no era una propiedad como cualquiera otra, el niño se les echaban en los espectáculos. Qué cosa mas in
cristiano es un ciudadado del cielo. En el primer casohumana que los combates de los gladiadores, en los
conformándose la ley con las ideas, permitia al padre que se veia degollarse unos con otros miles de hom
vender y aun matar á su hijo; en el segundo lo hace bres, por solo el placer de los especladores! Tácito
responsable de su existencia, imponiéndole las nume refiere que 19,000 hombres se degollaron unos con
rosas obligaciones de la paternidad. El bautismo, ha otros sobre el lago Suein , para diversion del empera
dicho un escritor, salva mas miembros á la especie dor. El pueblo habia tomado tanta aficion á estos jue
humana, que las guerras mas sangrientas pueden gos, que los ediles por deber de su oficio, estaban
destruir. obligados á darlosfrecuentemente. Julio Cesar, duran
3.° Esclavitud. No hay sociedades paganas en las te su edilidad, dió trescientas veinle parejas degladia
que no haya reinado la esclavitud. La clase mas nu dores, y mas tarde Trajano dió este espectáculo cien—
inerosa dela especie humana se hallaba en esta triste to veinte y tres dias seguidos, durante los cuales pre
condicion en las repúblicas antiguas, cuyos gobier sentó diez mil gladiadores en la arena. Tito, para ce—
nos libres tanto se han ensalzado; los artesanos, los lebrar los dias de su padre, condenó á tres mil judios
jornaleros eran tratados como animales. En Juvenal, á degollarse unos con otros. Antes de empezar la lu
una muger furiosa, dispuesta á matar un esclavo por cha los combatientes saludaban al feroz emperador:
capricho, pregunta á su esposo si es hombre un es «César los que van á morir le saludan», palabra tan
clavo. A medida que las naciones, en las que reinaba vil como lastimera, dice uno de nuestros mas ilustres
la esclavitud , se hicieron mas ricas, aumentaron el escritores. ¿Quién puede recordar sin estremecerse los
número de sus esclavos, y los trataron con un rigor tormentos que inventó Neron para los cristianos, y de
siempre en aumento. Habia en Atenas veinte mil los que Tácito no habla sin temblar, por mas enemi
ciudadanos y cuatrocientos mil esclavos, esto es, go que fuese de estos desgraciados?
veinte esclavos para cada ciudadano. Séneca refiere Asi se jugaba con la vida de los hombres. Sin em
que un caballero romano tenia cuatrocientos, y Plinio bargo no son estos todavia los límites de los crímenes
habla de otro que tenia cuatro mil. La libertad, pues, de la humanidad; hay una costumbre no menos bár—
era á lo mas la herencia de una vigésima parte de la bara que la de que acabamos de hablar, y que ha for
humanidad. mado parte de la religion de casi todos los pueblos pa
Los pueblos mas entusiastas por la libertad, dice ganos, que es la de inmolará los dioses víctimas hu—
un filósofo, fueron los que dieron leyes mas intolera manas. Muchos autores nos enseñan que los sacrifi
bles para los siervos. No se puede formar una idea de cios de sangre humana estaban en uso entre los feni
su suerte en Roma; se jugaba con sus costumbres, con cios, los sirios, los árabes, los egipcios, los cartagi
su salud y con su vida. Segun refiere Tácito, se in neses y demas pueblos del Africa, entre los tracios,
molaron cuatrocientos á los manes de Pedonio Segun los germanos, los bretones y los galos; los griegos y
do que habia sido asesinado en su casa, sin la menor los romanos, á pesar de su finura y su civilizacion
prueba de que estos desgraciados fuesen culpables de mas adelantada, no se abstenian de ellos. Plutarco
su asesinato. En el número de las leyes dadas contra nos dice espresamente que se inmolaron en Roma
los esclavos se cuenta especialmente el atroz Senado dos griegos y dos galos para expiar las galanterias
consulto Silaniano, habido en el reinado de Augus de tres vestales: pudiéramos citar otros ejemplares
to, y que contenia que cuando fuese asesinado un se acerca de esto. La misma costumbre se halla entre
ñor, todos los que se encontrasen bajo el mismo techo los pueblos antiguos, y llevada á un esceso que es
y todos los que no se hallasen á una distancia bastan tremece, si es cierto, como dicen los historiadores,
te apartada para que les hubiese sido imposible oir que estos infames holocaustos estaban en ellos tan
su voz ó el peligro que corria, serian entregados al multiplicados, que eran capaces de despoblar comar—
último suplicio. Aun entre los romanos, los esclavos CaS enteras.
que trabajaban en las tierras tenian constantemente En fin, esta bárbara supersticion triunfó de los mas
las cadenas en los pies; por todo alimento se les da vivos sentimientos de la naturaleza en las calamidades
ba un poco de pan, sal y agua; por la noche se les públicas; se vieron padres y madres arrojar sin emo
encerraba en subterráneos que no daban paso á la luz cion á sus hijos en medio de las llamasó entregarlos
sino por un solo agujero abierto en la bóveda de es— á instrumentos de muerte mas bárbaros todavia, la
tos horribles calabozos. Se les imponian trabajos su estátua de bronce de Saturno en Cartago y la de Teu
periores á sus fuerzas, pero menos insoportables to talis en los bosques sagrados de la Galia.
daiva que los caprichos ¿ señores. La historia nos Puede decirse que la idea de la libertad del hom
ha conservado el nombre de un romano, que por la hre ha sido la primera que ha resultado de la promul
mas ligera imprudencia de uno de sus esclavos lo ha— gacion del Evangelio. Los paganos que se bautizaban
cia echar vivó en su vivero para engordar las mu miraban como su primer deber dar libertad á todos
tenas. Cuando eran viejos se les enviaba á morirá sus esclavos, Melania, ilustre señora romana, emanci
 COS 531 COS
pó ocho mil, haciéndose cristiana. El bautismo se cutado, y aun porque los filósofos siempre habian en
consideró bien pronto como un acto de verdadera señado que la esclavitud está verdaderamente en la
emancipacion, y no se tardó mucho en oir quejarse á naturalezal Solo cuando las ideas religiosas, en
los señores paganos, de que bautizando sus esclavos union con las costumbres hirieron de muerte á la es—
se les daba la libertad sin tener derecho para ello. De clavitud, Alejandro III declaró que todo los cristia
aquilos cánones de la Iglesia que mandaban pagar al nos debian estar libres de la servidumbre. Hecha es—
señor el precio del esclavo que fuese bautizado. Por ta declaracion hácia la milad del siglo XII, produ
último la esclavitud se opone de tal modo al espíritu jo un efecto tan maravilloso, que Barthole dice en el
del cristianismo, que se ¿ formado en el seno de la siglo siguiente que no habia ya esclavos en Francia.
lglesia católica córporaciones religiosas, que no te El sueldo de este reino eminentemente cristiano lle
nian mas objeto ni mas ocupacion que rescatar á los ó á ser desde entonces tan propicioá la libertad, que
esclavos. Un cristiano no puede ser esclavo ni se ¿ á un esclavo de cualquier nacion que fuese
ñor de los esclavos; su ley le impone deberes que son poderlo pisar un instante para adquirir una especie
incompatibles con los derechos que la esclavitud da de carácter de hombre libre.
al señor, y con las obligaciones que impone al es
clavo.
Hay en toda la legislacion de los modernos cierto
carácter de dulzura que no puede derivarse sino de
Segun lo que acabamos de decir, el número de las costumbres evangélicas. ¿De cuánlas precauciones
esclavos debe estar en cada nacion en razon inversa no se han visto obligados á rodear las leyes para no
de su adhesion al cristianismo; en efecto, esto es castigar nunca injustamente? La instruccion de los
precisamente lo que nos demuestra la historia. En la procedimientos, las dilaciones, la libertad de la de
América, en el Paraguay, que era una especie de fensa, la eleccion de testigos, las consideraciones que
república eminentemente cristiana, no tenia esclavos, se tienen á los acusados, todo, hasta la lentitud de
y el pais sometido al poder de los españoles tenia muy los juicios sirve para demostrar que el hombre ha
p0cos. Decir cómo la estincion de la esclavitud ha adquirido ante la ley el carácter de dignidad que dá
pasado de las costumbres cristianas á las leyes civiles la religion.
no es una cosa facil; la religion encontró en el interés Habiendo efecluado el cristianismo la emancipa
ºposiciones de tal modo pronunciadas, que fue nece— cion religiosa, admitiendo que las cualidades morales
sario tiempo y perseverancia para vencerlas. y personales eran unicamente necesarias para abrir
Desde luego los cristianos fervorosos fueron los la puerta para el sacerdocio, ha dado ejemplo de la
primeros que dieron la libertad á los que dependian emancipacion civil; porque, como dice un sabio dis
de ellos. A fuerza de desacreditar el pretendido de tinguido, M. Ballanche, de la igualdad religiosa á la
recho de los señores, lo hicieron cada vez mas odioso igualdad civil no hay mas que deducir una conse
y aliviaron la suerte de los que no pudieron libertar. cuencia.
Los esclavos veian cambiar su posicion; la distancia Demostremos ahora cuál es el influjo del cristianis
que los separaba de los hombres, se estrechaba cada mo en los individuos, cuál su eficacia para producir
Veámas; aquirieron derechos al principio muy limi todas las virtudes, y comprimir todas las malas pa
tados, y acabaron por ser ciudadanos. siones.
Entre los esclavos de los antiguos y los siervos de La rehabilitacion de todas las debilidades de la hu
la edad media hay una diferencia esactamente igualá manidad es la consecuencia de la perfeccion de la
la de las costumbres; á estos se les alimentaba, vestia doctrina cristiana. Como una doctrina que da al hom
y daba casa, y por temor de que la avaricia de un bre nociones verdaderas acerca de su principio, su fin
señor inhumano exigiese de ellos mas de lo que pu— y el conjunto de sus deberes sea conocida y se grabe
diesen hacer, las leyesó las costumbres que tenian en el fondo de los corazones, destruirá necesariamen
fuerza de leyes, marcaron hasta las horas de trabajo te el vicio hasta las raices que las leyes humanas no
que el siervo debia á su señor. Por último los reyes, pueden alcanzar, y traerá el reinado de la virtud. Por
pues los mismos señores obedecian al impulso de las esto misino será el origen de la perfeccion y el prin
costumbres, emanciparon sucesivamente todos los es cipio de la verdadera felicidad, porque la fecilicidad,
esclavos que habia en el mediodia de Europa. segun la magnífica definicion de S. Agustin, no es mas
No hay cosa mas admirable que el modo como la que la tranquilidad del órden; y el orden es la concien
religion ha procedido para atenderá este objeto tan cia de las necesidades salisfechas de nuestra naturale
estraordinariamente favorable á la humanidad. Pa za, de la verdad para la inteligencia, de un legítimo
ciente en su accion, espera que las nuevas ideas que amor para el corazon; y con esto se agota en gran par
esparce en el mundo, hayan oambiado las costumbres te la fuente de los desordenes corporales, de las enfer
á fin de que las costumbres á su vez cambien las leyes. medades, que casi todas tienen la causa en la torpeza
No perdona nada para llegar á su fin; pero como no y en el desórden de la inteligencia y de la voluntad.
puede obrar sino por la fé sobre las acciones huma Ahora bien, el cristianismo es la verdad perfecta, la so—
nas, se contenta con instruir y exhortar. Cuántos lucion entera y popular de todas las grandes cuestiones
males no hubiera causado, cuánta sangre no hubiera á las que estan ligados los intereses del hombre; una
derramado, si satisfecha de sus propias luces hubie— completa legislacion de su entendimiento y de su co
ra querido emancipar en un solo dia todos los escla razon, y hemos visto toda las enfermedades sociales,
vos de Europa! ¡Qué tirania no le hubiera sido nece todas las opresiones del hombre por, el hombre, des
*sario ejercer contra aquellos que creian tener un ver truidas por su influjo. ¿Qué nos queda que decir para
dadero derecho de esclavizará sus semejantes, por demostrar esta influencia tanto en los individuos, co
que siempre se habia creido y siempre se habia eje mo en las sociedades? Nada, sino quizá el descubrir el
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cuadro de los efectos admirables que el Evangelio pro mo contra los filósofosº anos y se apoya principal
duce todos los dias en aquellos que lo aceptan y se so mente en la autorida la tradicion; segun él es
meten á su accion. La accion perfeccionadora del cris imposible establecer una religion sobre los principios
tianismo sobre el hombre debe aceptarse libremente, solos de la razon. Ataca al mismo tiempo la secla de
puede pues repelerse, y por esto mismo habrá una los judios caraitas, que no se someten mas que á la
multitud, p. a.d... infinita de grados en la aceptacion Sagrada Escritura. Se halla en esta obra un compen—
que de ella se haga; asi tambien habra variaciones dio bastante esacto de la creencia de los judios. Se
tan infinitas en la perfeccion moral de los cristianos, tradujo primero al árabe, despues al hebreo rabínico
desde la primera lucha contra una inclinacion desor— por R. Juda ben Thibbon. Hay dos ediciones de Ve
denada hasta el heroismo que las encadena todas. Asi necia, una que no contiene mas que el testo, otra que
pues, en las masas de los cristianos es necesario consi une á él el comentario del R. Juda Muscalo. Buxfort
derar los efectos del cristianismo. llé aquí pues un pe— lo ha hecho imprimir en Basilea en 1660, con una
queño número de hechos ó de principios, cuya verdad version latina y notas. Tambien hay una traduccion
no trataremos de demostrar porque es evidente, y que española, hecha por el judio Aben-Dana con obser
establecerán perfectamente nuestra tésis. vaciones en la misma lengua.
1.”. El cristianismo ha formado y forma todavia
en todos los estados de la sociedad hombres de una Creador, creacion. Crear es producir los
virtud perfecta, libres de las laquezas mas comunes seres por solo la voluntad. No se puede atribuirá
en otras sociedades. Dios este poder de un modo mas enérgico y mas su—
2." . La virtud de los cristianos está siempre en blime que lo ha hecho Moisés, Gen, c. 1. y. 3. «Dijo
razon directa de su fidelidad en vivir segun las doc Dios: hágase la luz, y fue hecha la luz». Asi es co—
trinas que profesan; y sus vicios en razon directa de mo representa sucesivamente todas las producciones
su apartamiento de esta doctrina, lo cual establece de Dios; no le cuestan mas que una palabra, un solo
una demostracion viva y palpable del verdadero prin aclo de su voluntad. Segun el Salmista, habló Dios
cipio perfeccionador del hombre. y todo fue hecho; mandó, y todo fue creado, Ps.
3.° Se notan mucho los vicios de los cristianos, 148, y.5; Dios mismo dijo por boca de Isaias: «He
aun sus virtudes nos parecen con facilidad imper llamado al cielo y la tierra, y se han presentado»;
¿ porque se las compara con la doctrina que es c. 5, y, 2 ; c. s y. 12. Judit habla lo mismo:
la misma perfeccion teórica. Al contrario, en las so— «Ilabeis hablado, Señor, y todo se ha hecho; ha—
ciedades paganas, las virtudes mas comunes entre beis dado un soplo, y todo ha sido creado; Judith,
nosotros sobresalen en ellas; porque contrastan con la c. 16, y. 17. La madre de los Macabeos enseña á su
corrupcion general y con la de las leyes igualmente hijo que Dios ha hecho de la nada el cielo, la tierra,
corruptoras, porque positivamente autorizan y no todo lo que contienen y la raza humana; Il Maca
prohiben. beorum, c. 7, y. 28. El dogma de la creacion ha sido
..." De los sabios de la antigüedad cuyas virudes pues profesado constantemente entre los judios: ¿ha
se han ecsaltado tanto para enseñar que no hay ne podido venir de otro origen que de la revelacion
cesidad del cristianismo para formar hombres virtuo primitiva?
sos; no hay ninguno de ellos á aquien la historia no En efecto, nos enseña Moisés que Dios bendijo y
le acuse de muchos vicios, que en nuestras costum— santificó el séptimo dia; ¿por qué, sino para que sir
bres cristianas son castigados con penas infamantes, viese de monumento perpétuo de la creacion? La
ó al menos, reprobados por la opinion. semana ó el modo de contar los dias por siete ha sido
5." Lo que nos impide conocer todo lo que debe observado por los patriarcas, antes que se pudiese
mos al cristianismo en la perfeccion moral de los in referir á cálculos astronómicos. Noé permaneció siete
dividuos es la misma estension de sus beneficios. dias antes de salir del arca; Gén., c. 8, y . 10 y 12.
Nuestras ideas y nuestras habitudes le pertenecen, Las b0das de Jacob duraron siete dias; c. 29, y. 27,
y esto es verdadero ann para aquellos mismos que le lo mismo sus funerales; c. 50, y. 10. La ley de san
insultan en nombre de nuestras ideas, porque él es tificar el sábado ó el séptimo dia de la creacion fué
quien ha creado todo lo que hay puro en la atmósfe— renovada en el desierto; Eacod., c. 16, y.23; c. 20,
ra intelectual y moral que respiran. y. 11. Por esto los judios tenian respeto al número 7.
6.” Cuando se considera esto de cerca conócese Si se mandó la santificacion del sábado bajo pena
que el cristianismo ha hecho casi imposibles muchos de muerte, es por la importancia del dogma de la
desórdenes comunes en las sociedades paganas; y en creacion. Es evidente que la intencion de Moisés al
desquite ha hecho casi necesarias virtudes apenas escribir el Génesis fue la de prevenir á los hebreos
conocidas entre aquellas. La incredulidad no puede contra el error de los demas pueblos que admitian
aparecer entre nosotros sino cubriéndose con la más— muchos dioses, y que adoraban los astros y los ele
cara del cristiano; se vé obligada á simular la caridad mentos, y contra todos los falsos sistemas filosóficos
cristiana por la filantropia. Se la proscribiria pública que debian aparecer en la continuacion de los siglos.
mente el dia en que se presentase al desnudo, orgnllo De consiguiente les enseña que un solo Dios ha crea
sa, apasionada y egoista. do todas las cosas. Dios, pues, no ha tenido necesidad
de cooperador, puesto que obra con solo su querer;
Cozri. Algunos judios pronuncian cuzari, libro los astros y los elementos no son dioses, sino criatu
suyo, compuesto hace mas de 500 años por el rabino ras que Dios ha hecho para utilidad del hombre; él
Juda el Levita. Es una disputa ó especie de diálogo solo gobierna todas las cosas con su providencia, por
sobre la religion, en el que el autor defiende el judais que desde el principio estableció el órden que reina
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en la naturaleza; solo él es el distribuidor de los bie con respecto á una cuestion que escedia á su inteli—
nes y los males, y seria un absurdo atribuirlos á otros gencia, por las frecuentes contradicciones en que han
ue no sean él. Ási de una sola pincelada ha destrui caido. Si hubiesen admitido un Dios creador, es
o de raiz los fundamentos del politeismo y de la de presumir que hubiesen sacado de este conocimien
idolatría, el falso sistema de las emanaciones que ha to las consecuencias que evidentemente emanan de
sido el orígen de tantos errores, la hipótesis no me él; hubieran deducido la unidad, la simplicidad, la
nos absurda del hado ó de la fatalidad y todos los espiritualidad, la providencia de Dios, que nunca la
desvarios filosóficos, mucho tiempo antes de que na hubieran tenido por el alma del mundo. Mosheim
cieran. llega hasta pretender que los mismos platónicos del
En segundo lugar, de la nocion de Creador se siglo III y IV, que conocian los dogmas del cristianis
deducen todos los atributos de Dios; este dogma solo mo, no han admitido sino aparentemente el de la
nos da el verdadero conocimiento de ellos. Dos es el creacion; que ellos lo entendian, no en un sentido real,
Ser necesario ó existente por sí mismo, porque es la sino en un sentido metafísico, el que no significa
primera causa sin la que ninguna cosa hubiera podi nada (Cudworth, Sist. intel, tom. 2, p. 287). Sea de
do salir de la nada; es eterno, nada habia antes esto lo que quiera, queda incontestable que el dogma
que él, y es anterior á todo tiempo; es Todopodero— de la creacion ha provenido, no de los razonamientos
so, nada puede resistirá aquel que obra por solo su filosóficos, sino de la revelacion primitiva y de la
querer. Es infinito; ninguna causa lo puede limitar: tradicion conservada por los patriarcas y por sus des
¿por qué espacio podia ser limitado antes de la crea cendientes.
cion? Es espíritu puro, porque él ha sacado de la * Las pruebas de la existencia de Dios, deduci—
nada la matería y porque obra con inteligencia; para das por los filósofos cristianos, forman una especie de
conocer todo lo que es, todo lo que será, y todo lo gradacion, dice Bergier, Tratado de la verdadera
que puede ser, no necesita mas que ver la estension religion, t. 1, p. 405. 1." Hay seres y es evidente que
de su poder; no le debe costar mas el gobernar el no son ni todos necesarios, ni todos contingentes:
mundo, que lo que le ha costado el formarlo. luego es preciso admitir un solo ser necesario, una
Careciendo los filósofos del conocimiento de este primera causa de la existencia de todas las cosas.
dogma esencial, han sido incapaces de demostrar la 2." La materia no es un ser necesario; luego ha reci-.
unidad, la simplicidad, la perfecta espiritualidad de bido la existencia de una causa inmaterial. 3." Dife—
Dios; ó la han concebido como el alma del mundo, rentes masas de materia se hallan en movimiento, y
ó han pensado que Dios habia dejado á espritus in el movimiente no les es esencial; luego les viene mas
feriores el cuidado de fabricarlo y gobernarlo. La ó menos de cerca de una causa activa ó de una vo
teología de Moisés, que es la de nuestro primer pa— luntad. Estas tres demostraciones son metafísicas.
dre, era pues el mejor preservativo contra los diver 4." El movimiento de un cuerpo está sujeto á ciertas
sos estravios del género humano. leyes; hay una uniformidad constante entre el movi—
Sin embargo, escritores temerarios han aventura miento y los efectos que de él resullan; el principio
do que la creacion es un dogma nuevo, una idea filo— motor es pues la inteligencia, 5." Ademas de los cuer
sófica; que no se enseñó claramente por Moisés; que pos inanimados hay seres vivientes ó sensitivos; la
muchos PP. de la Iglesia lo han ignorado; que no es materia inerte por sí misma no puede ser un princi
muy esencial á la teología, etc. Todas estas objecio pio de vida; es pues necesario que los cuerpos ani
nes, arriesgadas y repetidas ciegamente por nuestros mados hayan recibido la vida de una causa que no es
incrédulos, caen por sí mismas en vista de la clari materia. 6.” Estos seres animados tienen sensaciones;
dad y energia del testo sagrado. sin embargo, no hay una conexion necesaria entre
Se agita una gran cuestion entre los mas hábiles las cualidades de la materia y las sensaciones; luego
críticos, á saber, si hay alguno de los antiguos filó— esta conexion es obra de una voluntad libre, que ha
sofos que haya admitido el dogma de la creacion; si presidido á la construccion de los órganos sensitivos.
todos lo han desechado espresamente; si todos han 7.º Entre los seres animados los hay que piensan, y
defendido la eternidad del mundo, ó la eternidad de el pensamiento no puede ser una operacion ni un atri
la materia. Cudworth, en su sistema intelectual, ha buto de la materia; luego es un espíritu el que ha
bia aventurado que los filósofos mas antiguos que criado las sustancias pensadoras. 8." Esta reunion de
Aristóteles no habian considerado el principio, nada seres diferentes, que llamamos mundo, no es elerna;
no se hace de nada, como incontestable; habia citado no se ha formado sin causa; luego ha tenido un cria—
algunos pasajes que parecian probar que Pitágoras, dor. 9.º Vemos en el mundo un órden que tiene rela—
Platon y algunos de sus discípulos habian supuesto cion con nuestras necesidades, con nuestra conser—
una especie de creacion. Pero Beausobre, Leclerc, vacion y con nuestro bienestar; luego el autor del
Mosheim, Brucker y otros son de parecer que no mundo tuvo sus designios al formarle. IIé aquí seis
son decisivos estos pasajes, que estan contradichos demostraciones físicas. 10." No bastaria á nuestras
por otros mas claros; de lo que deducen que ningun necesidades el órden físico del mundo, si no fuese el
filósofo ha enseñado la creacion tomada en rigor. Anfundamento de un órden moral entre los seres pensa—
quetil se ha dedicado á demostrar que Zoroastres y dores ó racionales; nosotros conocemos su necesidad;
sus discípulos han profesado esta verdad terminante luego el criador del mundo es tambien su legislador.
mente: Memoria de la Academia de las Inscripcio 11." El hombre que es bastante temerario para negar
nes, tom. 69, en 12.° p. 123. V. Dios. la existencia de Dios, es castigado con el desórden
Sin embargo es necesario confesar que es dificil en que se sumerge; luego el eterno legislador es tam
ver cuál ha sido el verdadero sentir de los filósofos bien vengador de sus derechos. 12.° Todos los pue
TOMO I. 73
 RE 53. CE
blos reunidos en sociedad han reconocido qnánime ni de los demas filósofos, puesto que ninguno de ellos,
mente esta verdad; han adorado un Dios; luego él ha enseñado la creacion. Este Padre declara que ha
mismo es el que les ha inspirado esta idea, esta in— renunciado á su doctrina para estudiar los profetas,
clinacion ¿l Tres obras morales que confirman Dial, cum Tryph., n. 7 y 8;. luego es en los profetas
las precedentes. ó en los escritos de Moisés donde ha hallado
de la creacion.
¿
Se podrian quizá añadir otras pruebas; estas son
mas que suficientes. Se encuentra su gérmen en el Por lo demas Beausobre no ha disimulado su inten
mismo símbolo de la religion primitiva: de lo que se cion; queria justificar á los socinianos acusados de
sigue que continuamos razonando como nuestros pri negar la creacion de la maleria; para hacerlos pare
meros padres. V. ATEo, Dios.) cer menos culpables, le pareció bien defender que
Ha sido pues una temeridad inescusable por parte este dogma no estaba enseñado con bastante claridad
de Beausobre el sostener despues de Burnet, que es en nuestros libros santos; con todo esto que no es
incierto si este dogma ha formado parte de la antigua muy esencial á la religion porque no conduce al ateis
teologia judia; que no hay en los libros santos ningun mo, y que algunos deistas lo han asegurado asi bajo
pasaje por el que se pueda probar demostrativamente su palabra. Segun este bello razonamiento es necesa
á un entendimiento prevenido. Hist. del Maniqueismo, rio escusar todos los errores, cuando no destruyan
l. 2, l. 5, c. . Convenimos en que no hay un pasaje absolutamente toda religion. Pero este crítico, tan ca
bastante claro, ni un argumento bastante demostrati rilativo hácia todos los herejes, tan ingenioso en ha
vo para convencerá un entendimiento prevenido; ¿pe cer su apología, debiera haber sido mas indulgente
ro la prevencion de un razonador pertinaz cambia la con los PP. de la Iglesia y con los teólogos católicos;
significacion natural de las palabras? Confesamos tam cuando se trata de justificar á los primeros, la menor
bien que el hebreo bara, el griego kryosEvN, el latin espresion susceptible de bnen sentido le basta para
creare, el francés créer, no espresan siempre la crea . no impularles un error; cuando se habla de los se
cion propiamente dicha; ninguna lengua puede tener ¿ nunca se han espresado con bastante cari—
una palabra sacramental para designarla, porque no ad para él; nunca han razonado con suficiente exac
es una idea que haya ocurrido naturalmente al inge titud; es necesario no hacerles gracia en nada.
nio de los inventores del lenguaje; ¿pero no hay otro Brucker, menos preocupado, confiesa que la pre
medio de espresarlo? Si creemos en esto á Beausobre, vencion de los antiguos filósofos ¿ dogma de
los autores sagrados, que dicen que Dios lo ha hecho la creacion les ha hecho abrazar el absurdo sistema
todo de nada, que ha sacado todas las cosas de la de las emanaciones, que ha sido el orígen de todos
nada, que lo que existe lo ha hecho de lo que no los desvaríos de los gnósticos, y que S. Ireneo lo
existia, no han enseñado la creacion con bastante comprendió bien escribiendo contra estos herejes.
claridad; porque los antiguos han llamado nada, la Hist. Philos., t. 6, p. 539, nota (o). No es pues éste
nada á lo que no eacistia, á la materia y los seres que dogma nada menos que indiferente, y nunca ha pa—
no habian recibido aun su forma. ¿No es esto jugar recido tal á los PP. de la Iglesia.
con las palabras? Beausobre debia al menos decirnos El P. Baltus, en su Defensa de los santos PP. acu—.
de qué espresiones se debian servir los escritores sa sados de platonismo, . . 3, p. 319 y sig., ha hecho
¿ para enseñar la ereacion con bastante claridad. ver que todos han profesado esta verdad importante y
Razonando como él, se probaria que el mismo no ad han refutado á Platon, que suponia eterna á la ma
mite con bastante claridad este dogma, apesar de la teria. V. EuANACION.
profesion que ha hecho de él. Dijo Dios, y todo fue he
cho; dijo, hágase la luz y fue hecha la luz; asi hablan Uredibilidad. Se llaman motivos de credibili
los autores sagrados: ¿se halla este lenguaje entre los dad las pruebas que nos convencen que una religion
profanos? ha sido revelada por Dios, por consecuencia que es
Por la misma prevencion duda Beausobre si S. Jus verdadera, puesto que Dios que es la verdad misma
tino ha visto la creacion de la materia en las palabras no puede revelarnos nada falso. En el artículo CRus
de Moisés; porque en su primera Apol., n. 59, piensa TIANismo, citaremos sumariamente los motivos de cre
que Platon ha tomado de Moisés lo que dijo de la for dibilidad que prueban que una religion es divina ó
macion del mundo; asi Platon supone que Dios lo ha revelada por Dios. -

formado de una materia preexistente. Mas para saber Hay una gran cuestion entre los teólogos y los in—
lo que ha pensado S. Justino es necesario no conten crédulos en saber cómo debe uno conducirse para
tarse con un solo pasaje. En su erhortacion á los grie probar la verdad de una religion. Estos últimos pre
gos, n. 22, dice: «que la diferencia que hay entre el tenden que es necesario examinar los dogmas que
criador y el obrero consiste en que el primero no tie enseña, ver si son verdaderos ó falsos en sí mismos
ne necesidad mas que de su propio poder para pro para juzgar si son revelados ó no. Los primeros de
ducir los seres, en ¿ que el segundo tiene necesi fienden que se debe empezar por examinar si está ó
dad de la materia para hacer su obra º N. 23 prue no probado el hecho de la revelacion, que si lo está,
ba que si la materia fuese increada, Dios no tendria se debe deducir que los dogmas son verdaderos, sin
¿ sobre ella y no podria disponer de ella. ¿Es esto creerse en estado de juzgarlos en sí mismos. Se trata
bastante claro? Asi Beausobre confiesa que si este de saber cuál de los dos procedimientos es el mas ra
Padre ha sido constante en sus principios, es necesa zonable y conduce mas seguramente á la verdad; nos
rio que haya creido la creacion de la materia. Historia parece que el de los teólogos.
del Maniqueismo, l. 5, c. 5, S.5. Asi S. Justino no ha 1." La religion se ha hecho para los ignorantes, as
omado este parecer de Platon, puesto que lo refuta; como para los sabios; debe pues tener pruebas qu
 CRE 535 CRE
esten al alcance de los primeros como tambien al de garnos: ¿qué se diria de un ciego de nacimiento que
los últimos; esta consecuencia es confesada defen antes de prestar fé á los que le hablan de los colores,
dida aun por los mismos incrédulos. Asi un ignoran de un espejo, de una perspectiva, quisiese concebir
te no está en estado de juzgar si los dogmas del por sí mismo lo que se le dice? Tal es precisamente
cristianismo, por ejemplo, son falsos ó verdaderos; el caso en que nos encontramos cuando Dios se digna
si la moral, que enseña es buena ó mala; si el culto hablarnos.
que prescribe es razonable ó supersticioso; si la disci .." Es un absurdo el querer convencernos de
plina que ha establecido es útil ó abusiva. nuestros deberes religiosos de diferente modo que lo
Esta discusion es evidentemente superior á sus somos de nuestros deberes civiles. Estamos instruidos
fuerzas; seria pues por su parte una imprudencia el de estos últimos, no por un ecsamen especulativó de
querer entrar en ella. Otra consecuencia en la que lo que es bueno, laudable, util, honesto, razonable
convienen los incrédulos. en si mismo, sino por pruebas morales de las que re
Pero un ignorante puede estar convencido por he sulta que se ha dado tal ley, que tales órdenes, tales
chos, incontestables que Dios ha revelado la religion usos se han establecido y observado en la sociedad.
cristiana. Puede tener una certeza moral de los mila Sobre este punto los razonamientos y las objeciones
ros de Jesucristo y de los apóstoles, del testimonio de los filósofos no sirven para nada, no se hace de
e los mártires, del establecimiento milagroso del ellos ningun caso, y ellos mismos no se atreverian á
cristianismo, de los efectos que ha producido y que conformarse con ellos et la práctica. Con qué dere
¿ todavia en les pueblos que lo profesan , de cho pretenden establecer por sus teorias lo que Dios
os que esperimentaria él mismo si practicase constan puede ó no puede enseñarnos, candarnos ó permi
temente los deberes, etc. Asi por éstas pruebas este tirnos?
riores ó por estos motivos de eredibilidad es por los 5 º No nos toca á nosotros probar el cristianis
que debejuzgar de la verdad del cristianismo. En va mo de diverso modo qne lo ha sido por sus mismos
no creen los incrédulos que Dios ha establecido un fundadores, que convirtieron á los judios y á los pa
modo de juzgar para los sábios y para los filósofos y ganos. Asi los apóstoles no entraban á discutir cada
otro para los ignorantes. Los primeros pueden tener dogma que anunciaban; probaron con hechos la mi
mayor número de pruebas que los segundos; pero las sion divina de Jesucristo y la suya. S. Pablo dijo á
pruebas que son verdaderas y sólidas para estos no los Corintios. «No he apoyado mis discursos, ni mi
pueden ser falsas d engañosas para aquellos. predicacion en los razonamientos de que se sirve la
2." Porque un dogma cualquiera nos parezca ver sabiduria humana para pesuadir, sino en las demos
dadero, no se deduce por eso que Dios lo haya reve traciones de un poder divino, del espíritu de Dios (en
lado; luego porque nos parezca falso tampoco se si— los milagros)á fin de que se establezca vuestra fé, no
gue que Dios no lo haya revelado. Es mas fácil de sobre la sabiduría de los hombres, sino sobre el poder
engañarnos con el ecsámen de una doctrina oscura y de Dios». I. Cor., c. 2, y. 4.
abstracta, que en el ecsamen de un hecho sensible Efectivamente la persuasion que tenemos de una
palpable. Con razonamientos capciosos se puede fa verdad por el raciocinio no es la? nunca se ha acor
cilmente aturdir y estraviará un hombre que no está dado uno de llamar fé el asentimiento á una verdad
amaestrado en la disputa, ¿Pero de qué sirven los ra demostrada. ¿Qué mérito tendria el creer en ella? Pe
ciocinios, las conjeturas, las sospechas contra hechos ro Dios quiere que demos fé á su palabra, y es un
invenciblemente probados? No hay una sola verdad homenaje que debemos á su veracidad soberana. El
especulativa contra la que no se puedan hacer obje mérito de esta fé consiste en resistirá las dudas que
ciones que parecen indisolubles; pero todas las obje— ueden sugerirnos nuestros razonamientos, y los de
ciones posibles no nos disuadirán nunca de un hecho os incrédulos. Los que quisieron raciocinar contra los
cuya certeza moral es llevada al mas alto grado de no apóstoles fueron los autores de las primeras herejías,
toriedad. Los sofismas de los escépticos, de los pir y sabemos hasta qué esceso llevaron el absurdo de
ronianos, de los , acatalépticos han podido presentar sus opiniones. La misma desgracia sucederá hasta el
como dudosos todos los dogmas filosóficos; pero han fin de los siglos á todos los que se obstinen en seguir
impedido ellos nunca fiarse en el testimonio de sus este método infame.
sentidos y en el de otros hombres? Los filósofos, aun 6." Las enormes consecuencias que emanan del
los mas incrédulos, se han visto obligados á condes método de los deistas son palpables. A fuerza de sos
cender con él en el trato ordinario de la vida. tener que Dios no puede revelarnos verdades incom
3.° Dios, ciertamente se halla en el derecho de reprensibles, y que nos es imposible el creer lo que no
velarnos misterios ó verdades incomprensibles, pues concebimos, han llegado á punto de pretender que
que nosolros las conocenos semejantes por el senti Dios no puede revelarnos nada; que aun cuando lo
miento interior, por nnestros raciocinios, por el tes hiciese no podriamos nunca estar seguros del hecho
timonio de nuestros sentidos, por la deposicion de los de la revelacion. En consecuencia un salvaje, un ig
demas hombres; lo demostraremos en la palabra Mis norante incapaz de descubrir ninguna verdad por sus
TERIo. Tambien es imposible forjar una religion esen raciocinios está tambien dispensado de escuchar á un
ta de misterios, ningun sistema filosófico ó de incre— predicador que venga á instruirle de parte de Dios:
dulidad que no contengan un gran número de ellos. debe tambien desconfiar de él y resistirle, vivir y mo -
Qué ecsamen pues podemos hacer de un dogma in rir en el embrutecimiento en que nació. En vir ...
comprensible? El ver si el que nos los anuncia es ó no del ecsamen especulativo prescrito á todos los hom
digno de crédito, si su testimonio debe admitirse ó bres por los deistas, debe haber tantas religiones, en
desecharse, si tiene ó no tiene derecho para subyu el mundo como hay cabezas bien ó mal organizadas.
 CRE 536
Nos objetan que, siguiendo nuestro método, un ma
hometano, un pagano, un idólatra, deben creer con
tanta certeza como un cristiano que su religion es
verdadera, puesto que todos deben juzgar que les ha
(CRE
Creencia. Creer en general es lo mismo que
estar persuadido, convencido; asi creencia significa
persuasion, pero no toda persuasion pue le llamarse
Cr"eer Cl (l.

sido anunciada por hombres inspirados de Dios. Pe Esta mos persuadidos que dos y dos son , cuatro,
ro, ¿donde eslá la prueba de la inspiracion de Ma que los tres ángulos de un triángulo son iguales á dos
homa, y de todos los que han enseñado el paganismo? rectos; estas dos proposiciones son evidentes por sí
Los milagros atribuidos al primero son absurdos, y él mismas. Aunque no concibamos cómo la libertad se
mismo ha declarado en el Alcoran, que no habia ve puede conciliar con la inmutabilidad, sin embargo
nido para hacer milagros; los apologistas del paga estamos convencidos que Dios es libre é inmutable,
nismo, Celso, Juliano, Porfirio etc. no han citado porque esta es una verdad que se deduce evidentemen
mas que prodigios de que nadie ha sido testigo. No le de la nocion del Ser necesario, en consecuencia una
es este el lugar de llevar mas allá el paralelo entre verdad demostrada.
los autores de las falsas religiones, y los fundadores de Estamos seguros que un cuerpo es movido por otro
la nuestra. cuerpo; lo vemos con nuestros ojos, lo sentimos por
El método de los deistas no sirve mas para confir el tacto, aunque no comprendamos por qué el movi
mar á todos los infieles en sus errores? Un musulman miento se comunica de un cuerpo á otro. Conocemos
que no sabe leer, ciertamente que no se halla en es— que nuestra alma mueve á nuestro cuerpo, esta es
tado de demostrar la falsedad de los dogmas enseña una verdad de conciencia, aunque no sea posible con
dos por Mahoma, ni lo absurdo de las leyes que ha cebir cómo el espíritu puede obrar sobre el cuerpo.
¿ Un pagano, conseguirá descubrir lo ab— En todos estos casos nuestra persuasion no es pro
surdo del politeismo, mientras que Platon y Ciceron piamente una creencia; nosotros no creemos, sino que
lo han apuntalado con razonamientos filosóficos? vemos y sentimos.
Nunca los raciocinadores han establecido una sola Aunque no hayamos visto la ciudad de Roma, cre
verdad, ni destruido un solo error en materia de re emos su ecsistencia por el testimonio de los que la han
iigion. visto, de los que la habitan, por las relaciones que te
No es fuera de propósito observar que el método, nemos con ellos etc. Los pueblos de la Gninea que
segun el que los deistas quieren juzgar de la revela nunca han visto el hielo, que no conciben cómo el
cion, es precisamente el mismo que el de los protes agua puede llegará ser nn cuerpo sólido, creen sin
¿? que este ha franqueado el camino al pri embargo la ecsistencia del hielo por el testimonio de
mero. Un protestante quiere ver en la Escritura cuál mil viajeros; si no lo creyesen, serian unos insensa
es la doctrina que Jesucristo y los apóstoles han en tos. Los ciegos de nacimiento no conciben los fenóme
señado, y juzgar por sí mismo el sentido en que debe nos de los colores, un espejo, una perspecliva, un
entenderse; lo mismo que un deista quiere juzgar por cuadro; sin embargo creen en su ecsistencia y esta
sus propias luces de la verdad ó de la falsedad de es persuasion se la dicta el buen sentido. En estos dife
ta doctrina, para saber despues si es ó no revelada. rentes casos la creencia es una fé humana fundada so
Un católico, siempre constante en sus principios, sos bre el testimonio de los hombres.
tiene que es necesario ecsaminar la mision de los quo Nosotros creemos que Dios es uno en tres personas,
se dicen enviados de Dios; que si la pruehan, ellos que el Verbo encarnado es Dios y hombre, que Je
son los que deben enseñarnos lo que Dios nos ha re sucristo está realmente en la Eucaristia, etc.; aunque
velado, ya de viva voz, ya por escrito, y de dar— no concibamos estos misterios los creemos sobre el tes
nos el verdadero sentido de esta revelacion. W. CA timonio de Dios ó por que Dios los ha revelado, esta
TOLICIDAD. creencia es una fé divina. Estamos convencidos de la
revelacion por los motivos de credibilidad de que está
Credo. Asi se llama el símbolo de los apóstoles, revestida.
que es el compendio de las verdades de la fé cristiana, Cuando se pregunta ¿podemos creer lo que no con
y empiezapor la palabra credo, yo creo. Todocristiano cebimos? esto es preguntar si los ciegos de nacimiento
que lo reza hace un acto de fé; sin embargo, se oye á ueden creer la ecsistencia de los colores, si los pue
los moralistas quejarse algunas veces de que los fie ¿ de la Guinea pueden creer la ecsistencia del hielo
les hacen muy rara vez actos de fé; suponen pues, y si nosotros mismos podemos creer la comunicacion
que no van á misa, ó no dicen el símbolo de los após— del movimiento de un cuerpo á otro. Sin embargo se
toles en su oracion. han hecho libelos para probar que es imposible creer
CREDO. Designa rambien el símbolo mas eslenso seriamente lo que no se concibe, que esto es un en
que el de los apóstoles y que ha sido formulado por lusiasmo y una locura, que nuestras profesiones de
los concilios de Nicea en 325, y de Constantinopla en fé son una gerga de palabras sin ideas, que el propo
381, símbolo que se canta ó que se reza en la misa, ner al ¿ un misterio es lo mismo que si se le
lo menos desde principios del siglo VI. Se dice inme hablase en una lengua desconocida etc.; todas estas
diatamente despues del Evangelio para atestiguar mácsimas son otros tantos acsiomas de la filosofía de
ue se cree y se recibe como la palabra de Dios lo que los incrédulos.
caba de leerse. Puede verse en el P. Lebrun una Para creer un dogma de é divina, es necesario que
esplicacion muy estensa de este símbolo y de la va este dogma sea obscuro é inconcebible? No; la espi—
riedad de ritos observados sobre este asunio en las di ritualidad y la ininortalidad del alma nos parecen ver
ferentes iglesias. Esplicacion de las ceremonias de la dades demostradas; pero podemos hacer abstraccion
misa, l. 1, p. 20. V, suroLo. de las pruebas naturáles que tenemos de ellas y creer
 (CRE 537) CR
estas mismas verdades, por que Dios las ha revelado, la religion, como la impiedad, la blasfemia, el sacri
un ignorante que nunca ha reflexionado sobre estas legio deben castigarse con la privacion de las venta
ruebas cree estos dos dogmas, porque la religion se jas que procura la religion, con la espulsion fuera de
0S º IlStº Ild. -

los templos y de la sociedad de los fieles por un

Los que vieron á Jescucristo obrar un milagro para tiempo dado ó para siempre; por las admoniciones, las
probar que tenia el poder de perdonar los pecados, escomuniones, elc.; pero que es contrario á la natu—
Mat., c. 9, y. 6, fueron testigos oculares de la reve raleza de las cosas castigar estos crímenes con penas
lacion, ó de un signo por el que Dios atestiguaba el aflictivas. Otros disertadores han sostenido que los
poder de Jesucristo, y tuvieron de él una certeza pastores de la Iglesia no tienen derecho para elimi
física. Sin haber visto los milagros del Salvador, te nar de la sociedad de los fieles á un ciudadano, ni pri
nemos de ellos una certeza moral llevada al mas alto varle de los sacramentos, porque esta pena lleva con
grado; no solo nos son atestiguados por los escritos de sigo la infamia y la pérdida de ciertas ventajas civiles.
testigos oculares y por una tradicion viva que nun De lo que, por último, resulta que los crímenes que ala
ca se ha sino por el efecto que han pro can directamente á la religion no deben castigarse con
ducido, que es el establecimiento del cristianismo. ninguna pena. Esta rara jurisprudencia mereceria
Nunca hubieran convertido á nadie los apóstoles, si mas atencion, si fuese propuesta por otros que por
los hechos que anunciaban no hubieran sido induda— culpables interesados en establecerla. Algunas reflec—
bles. Véase CERTIDUMBRE, siones bastarán para demostrar lo absurdo de ella.
Cuando se les echa en cara á los ateos y á los in— 1. La religión es el primer apoyo de las leyes,
crédulos las consecuencias de su doctrina y los funes sin ella serian muy impotentes; cualquiera que ataca
tos efectos que debe producir en las costumbres, di á la religion mina el fundamento de la misma legis
cen que la creencia influye muy poco en la conducta lacion, merece, pues, ser castigado con todas las clases
de los hombres, que únicamente el temperamento es de penas que las leyes pueden imponer, segun la di
el que determina los vicios y las virtudes; de aqui de versidad de casos. La religion por otro lado está auto
ducen que la religion es la cosa mas indiferente é inú— rizada por las leyes y forma parte de ellas; los gol
til del mundo. Por otro lado, sostienen que los vicios y pes dados á la una caen necesariamente sobre las
las desgracias de los hombres provienen de sus erro Olras.
res, que es necesario enseñarles la verdad para ha 2." Los crímenes que atacan directamente la reli
cerlos felices; por consiguiente, que es bueno predicar gion turban la tranquilidad pública. Naturalmente
el ateismo porque es la verdad; añaden que los erro todo hombre que cree en la religion, la ama, se toma
res en materia de religion son la causa de la mayor interés por ella y se cree herido cuando es atacada;
parte de los crímenes cometidos en el mundo. Es pal los insultos que se la hacen recaen sobre los que la
pable la contradiccion de estos principios. ¿ De qué enseñan y la profesan, asi como las invectivas contra
servirá á los hombres la verdad si este conocimiento las leyes recaen sobre los magistrados. Si las leyes no
no puede influir en nada sobre su conducta? Cómo la hubieran proveido el castigo, cada individuo se creeria
religion, que manda todas las virtudes y prohibe todos con derecho de vengar el honor de la religion, y es
los vicios, puede por sí misma producir un efecto di to no seria ventajoso para los culpables.
rectamente opuesto al objeto de su institucion? 3.° Cuando un impío se propusiese despreciar las
No sirve para nada el citar el ejemplo de los cris ecsecraciones, los analemas , las escomuniones lan
tianos viciosos para probar que su religion no influye zadas contra él por los fieles, donde estaria el casti
nada en sus costumbres. Cuando la creencia sujeta las go? El esceso del crímen seria el que procurara su
pasiones, no es sorprendente que estas, muchas veces impunidad.
mas fuertes, arrastren al hombre al crímen apesar de ." En todas las naciones civilizadas los crímenes
los remordimientos que le ocasiona la religion. Por el que atacan la religion se han juzgado dignos de cas—
contrario, si la doctrina favorece las pasiones, rom ligo por las leyes y por penas aflictivas: los moder
piendo el vínculo que tendia á reprimirlas, cierta nos legisladores no han sido mas severos en este asun
mente que debe hacer al hombre mas vicioso, puesto lo que los antiguos; nuestras leyes en este pnnto son
que sofoca en él la voz de la conciencia y los remor mas suaves y mas moderadas que las de los griegos
dimientos. Tal es, pues, el efecto que producirian el y romanos.
aleismo y la irreligion en todos los que han nacido En cuanto al poder de los pastores de la Iglesia,
con pasiones violentas. está fundado en la Sagrada Escritura y en el uso
Donde hablan los hechos, las conjeturas y los razo observado constantemente desde los apóstoles. Véase
namientos estan demas. Es incontestable que desde EscoMUNuoN. -

que se estableció el cristianismo hubo una revolucion

palpable en las costumbres de los judios y de los pa Crisma. Palabra formada de KRISMA, uncion; es
ganos, y las hizo mucho mejor que eran; este es un una composicion de aceite de olivas y de bálsamo,
hecho confesado aun por los mismos enemigos de la consagrada por el obispo el jueves santo, de la que
religion. Luego no es cierto en general que la creencia se sirve en la administracion del bautismo, de la con
de los hombres no influya en nada sobre su conducta. firmacion y del órden. Para la Estrema—Uncion se usa
del aceite solo, bendecido tambien por el obispo pa
Cretenistas. W. HERMANAS DE S. JosÉ. ra este efecto. Los griegos le llaman el santo crisma,
myron, ungüento, perfume.
Crimen. Se ha escrito con frecuencia en nues Los maronitas, antes de reunirse á la Iglesia ro
tro siglo que los crímenes que atacan directamente á mana empleaban en la composicion de su crisma
 Cº 538) CR
el aceite, el bálsamo, el almizcle, el azafran, la tambien la doctrina de la Iglesia romana, Pero no hay
canela, las rosas, el incienso blanco y otras drogas. necesidad para esto de una transustanciacion en el
El P. Dandini, jesuita, enviado al monte Lbano en santo crisma ni en el agua del bautismo para borrar
calidad de nuncio del papa, en 1556, mandó en nn el pecado original. No fundamos el dogma de la tran
sínodo que el santo crisma no se compusiese en ade sustanciacion en el efecto que produce la Eucaristia,
lante más que de aceite y bálsamo. sino en las palabras de Jesucristo.
Como se cree que la uncion del santo crisma forma Por lo demas esta observacion de La Croze no es
parte de la materia del sacramento de la Confirma sola en la que ha mostrado su poca exactitud y sagaci
cion, solo el obispo tiene el poder de hacerla, lo mis dad. V. ARMENlos.
mo que el que se sirve en la ordenacion; pero en el
Bautismo y la Estrema-Uncion, la hace el sacerdote. Crisóstomo (S. Juan), ópico de oro. Patriar—
Antiguamente los obispos ecsigian del clero para ca de Constantinopla y doctor de la Iglesia; se llamó
la confeccion del santo crisma una contribucion que asi por su elocuencia; vivió en el siglo IV. La mejor
llamaban denarii chrismales; en la actualidad se sa— edicion de sus obras es la que ha publicado el P. Mont
ca únicamente una pequeña retribucion de las fábri faucon en griego y en lalin, en trece volúmenes en fo—
cas, distribuyéndoles los santos óleos en la mayor lio, en Paris el año de 1718. -

parte de las diócesis. V. el antiguo sacramentario por Los censores de los PP. han echado en cara á san
Grandcolas, 2." parte, p. 103. Juan Crisóstomo haberse espresado de un modo es—
La bendicion ó consagracion del Crisma, que sirve candaloso sobre la conducta que Abraham tuvo en
de materia á muchos sacramentos, es un testimonio Egipto con respecto á Sara su esposa. Aun cuando.
de la creencia de la Iglesia, y de los efectos que atri esta acusacion fuese mejor fundada no valia la pena
buye á estas augustas ceremonias; se ve por el pon de notar este lunar en un cuerpo de obras de trece
tifical romano en el que se halla la fórmula de que volúmenes en folio, y en un Padre de la Iglesia res
se sirve el obispo. Los protestantes no han dejado de etable por otro lado por la pureza de su moral y por
poner en ridículo esta práctica y de tratarla de su a moderacion de sus ideas. Este santo doctor no ar—
ersticion; es, no obstante, muy antigua, pues que se rastró á nadie á falsas ¿? la moral , y sus
a conservado en las seclas de cristianos orientales censores se han visto obligados á confesar que si el
que se separaron de la Iglesia romana hace mas de hecho de Abraham era referido por Moisés con todas
mil doscientos años. No hay mas supersticion en esta sus circunstancias, probablemente seria ácil escusará
ceremonia, que en la accion de Jesucristo, que se sir este patriarca. V. Barbeyrac, Tratado de la moral de
vió de lodo y de saliva para dar la vista á un ciego de los PP., c. 1, S. 2. Sin recurrir á esta presuncion,
nacimiento.
se puede ver en el artículo Abraham que no es muy
La Croze, en su Historia del cristianismo de las In dificil justificar su conducta.
dias, t. 1, p.308, pretende que los armenios consi A otros les pareció mal que S. Juan Crisóstomo
deran la bendicion del myron ó del santo crisma co hava condenado absolutamente el comercio. La ver—
mo un sacramento, y que atribuyen á esta accion la dad es, que lo condenó, no absolutamente, sino como
misma virtud que á la consagración de la Eucaristia. se hacia en su tiempo, es decir, la usura, el mono
Cita en prueba lina homilía de Gregorio de Nareka, polio, la mala fé, los fraudes y las mentiras de los co
doctor de la Iglesia armenia, que floreció en el si merciantes; si creyó que el comercio no podia hacer
glo XVI, y un pasaje de Bardanes, otro doctor ar se de otro modo, se engañó en un objeto de la política
menio del siglo XIII, en que dice: Vemos con los y no en los principios de la moral.
ojos del cuerpo en la Eucaristía pan y vino, y con Otros, por último, mas temerarios, han acusado
los de la fé ó del entendimiento concebimos alli el al santo doctor de haber sido de un carácter inquieto,
cuerpo y la sangre de Jesucristo, del mismo modo turbulento y escesivamente austero; de haber acar—
que en el myron vemos el aceite; pero por la fé ve reado por su temperamento la persecucion de la em
mos en él el espíritu de Dios.» Luego, dice, la Croze ratriz Eudoxia y de los cortesanos, á la que sucum
y todos los armenios admiten un sacramento desco ió. Esta es una calumnia. Este santo obispo no obra- .
nocido en la Iglesia romana, ó segun su opinion, la ba mal desaprobando las asambleas lumultuosas de
misma transustanciacion se hace en la Eucaristía por farsantes que se hacian al rededor de la estátua de la
la consagracion que en el myron por la bendicion; emperatriz, perturbando el oficio divino, ni de cen
hé aquí sin duda un argumento poderoso, pero he surar los vicios de los cortesanos. Si hubiera obrado
mos de aprender de dos doctores muy modernos, y de otro modo se le acusaria de haberlos adulado ba—
no parecen grandes téologos, cuál es la creencia jamente y disimulado los desórdenes á que deberia
e la Iglesia armenia? Nos parecen pruebas mas ob aberse opuesto. -

vias de su doctrina los libros litúrgicos de esta igle Mosheim conviene en que la conducta de Eudoxia,
sia y las profesiones de fé de sus obispos, que los es de Teófilo, patriarca de Alejandria, y demas obispos
critos de dos particulares; se pueden ver estas prue— que depusieron á S. Juan Crisóstomo por agradar á
bas en los tomos 1.° y 3.° de la Perpetuidad de la fe, esta princesa y hacerlo condenar al destierro fue
y en el P. Lebrun, l. 5. Lo mas que se sigue del pa igualmente cruel é injusta; pero dice que este santo
sajº de Bardanes es que la comparacion que hace entre es reprensible por haber aceptado la categoria y la
la Eucaristia y el myron no es muy esacta, significa autoridad que el concilio de Constantinopla habia
solo que por la unción del santo crisma recibimos la concedido á los obispos de aquella ciudad imperial;
gracia del Espíritu Santo tan realmente como el cuer de haberse puesto por juez en la desavenencia que
p0 y la sangre de Jesucristo por la Eucaristia; tal es uvo Teófilo con los monges de Egipto; de haberse
 CRI 839) CRl
alraido de este modo, fuera de tiempo, el odio y el San Juan Crisóstomo mereció á todas luces, ya al
resentimiento de este obispo; el traductor añade en ¿? de ha gozado durante su vida, ya el
una nota, que este mismo santo reprendió de una culto que se le ha decretado despues de su muerte.
manera indecente á Eudoxia por haber hecho colocar No se pueden disputar sus talentos, ni sus virtudes, ni
su estátua de plata cerca de la iglesia. la sabiduría de su conducta; el emperador Teodo
Aqui es palpable la prevencion de los protestantes sio ll, hijo de Eudoxia hizo completa justicia á la me
contra los PP. En el artículo NestoRIANIs Mo veremos moria del santo obispo, y pidió perdon del crimen de
que no han vituperado á Nestorio por haber ejercido sus parientes, Ningun otro Padre ha tenido mayor in
la misma autoridad que S. Juan Crisóstomo; al con— teligencia de la Sagrada Escritura, ni hizo de ella un
trario, han tomado su defensa, se han propasado uso mas juicioso. Ha sido por escelencia el predicador
contra S. Cirilo, que sin embargo no procedió contra de la misericordia de Dios, y de la caridad para con
Nestorio, culpable de herejia, con la misma pasion los pobres. Quizá seria de desear que no se hubiesen
que Teófilo, su tio, habia perseguido á S. Juan Crisós nunca separado del sentido que dió á las epístolas de
tomo, cuya inocencia es conocida. No es cierto que San Pablo. Sabemos con qué respeto ha citado San
este se constituyese juez entre Teófilo y los monges de Agustin á este Padre en sus escritos contra los pe
Nitria, á quienes este prelado acusaba de origenismo. lagianos y la grande opinion que tenia de su orio
Se refugiaron en Constantinopla, y San Juan Crisós— doxia.
tomo los recibió, los acogió con bondad, les preguntó La liturgia de San Juan Crisóstomo está todavia en
por su fé y los admitió despues á la comunion. Esto uso en la Iglesia griega; hablaremos de ella en la pa
no era pronunciar una sentencia contra Teófilo. Una labra LITURGIA. Véase Tillemont, tomo 11, vida de los
prueba de que estos monges no eran culpables, es PP. y de los mártires, 27 de enero; las obras de San
que despues de la muerte de S. Juan Crisóstomo los Juan Crisóstomo, tomo 13, etc. Hay en la coleccion de
restituyó su buen nombre Teófilo sin ninguna forma la Academia de Inscripciones, tomo 20, en 12.° p. 197,
una memoria en la que el Padre Montfaucon ha he—
lidad. El mismo se arrepintió en el lecho de la muerte
de haber perseguido á un sante, y quiso tener su ima cho la descripcion de los usos y costumbres del IV si
gen cerca de sí. glo, sacada únicamente de las obras de San Juan Cri
Tampoco es cierto que este santo se haya propasa sóstomo.
do indecentemente contra la emperatriz Eudoxia; no
declamó mas que contra el tumulto y los desórdenes Cristiandad. Antiguamente significaba el cle
á que se entregaba el pueblo al rededor de la estátua ro; se llamaba corte de cristiandad una jurisdicion
de esta princesa. El Padre Montfaucon ha probado la eclesiástica y el lugar donde se celebraba. Todavia hay
falsedad de un pretendido discurso atribuido á San diócesis en las que los deanes rurales se llaman dea
Juan Crisóstomo sobre este asunto. nes de la cristiandad. En el dia se entiende por cris
Un incrédulo de nuestro siglo, autor del pretendi— tiandad la coleccion general de todos los hombres
do Cuadro de los santos, que no es mas que un teji ue profesan la religion de Jesucristo, sin atender
do de invectivas y calumnias, añade á los cargos de á las diversas opiniones que los dividen en diferentes
los protestantes que este santo patriarca fué un gefe sectas. Asi la cristiandad no está contenida solo en la
de partido; que no tuvo ternura con su madre aban.- Iglesia católica, puesto que fuera de esta Iglesia hay
donándola; que debilitó su salud con las austerida hombres y sociedades que llevan el nombre de cris
des; que se vieron obigados á desterrarlo por su or— tiano, y hacen profesion de creer en Jesucristo.
gullo y su terquedad: condenó absolutamente las Pero en los primeros siglos de la Iglesia no se daba
segundas nupcias; que ha reprendido el matrimonio el título de cristiano á los herejes. Tertuliano, S. Ge
como una imperfeccion; y que no ha predicado con— rónimo, S. Atanasio, Lactancio, dos edictos, uno de
tra la persecucion sino porque era el mas débil. Constantino y otro de Teodosio, el concilio general
Sin embargo es constante que San Juan Crisóstomo de Sardica establecen que los hereges no son cristía
no estuvo á la cabeza de ningun partido, es un absur nos. Bingham, Oríg. eccles., lib. 1, c. 3, S., l. 1,
do acriminarle por el afecto que su pueblo mostró por p. 333. Asi la palabra cristiandad tiene en el dia un
él, cuando lo vió injustamente perseguido; para pre sentido mas general que antiguamente.
venir toda clase de sedicion se oculto este santo obis En todos tiempos los enemigos del cristianismo han
po secretamente de su pueblo y de su clero, y ejecutó tenido como crimen esta multitud de sectas que lo di
sin murmurar las órdenes del emperador. No aban viden; de esto toman ocasion para defender que esta
donó á su madre sino por cierto tiempo y no tardó en religion es una manzana de discordia, que parece se
volver á su lado; ¿ de ella siempre con el mayor ha arrojado entre los hombres para ponerlos en lucha
respeto, y esta madre virtuosa tuvo en todas ocasio— y animar unos contra otros.
nes motivos para felicitarse por la gloria de que lo Mas no se debe atribuirá la religion en general un
vió cubierto por sus talentos y sus triunfos. Con vicio del hombre á quien ella debe corregir, ni á una
venimos en que practicó todas las austeridades de la religion particular el inconveniente que se halla en
vida monástica; que ensalzó el mérito de la virginidad todas las religiones, en las escuelas de filosofia, en—
y de la continencia; que consideró este estado como tre los incrédulos como entre los creyentes. Asi no
mas perfecto que el del matrimonio; que habló de las hay en la tierra ninguna religion que haya podido
segundas nupcias como , todos los demas PP. de la prevenir las disputas y los cismas, ningun sistema
Iglesia, y nosotros defendemos que en todo esto obró que haya reunido todos los filósofos, , ni ningun sis
bien, y que esto es para él un motivo de elogio y no tema de incredulidad que haya podido poner acordes
de censura. W. BIGAMIA, CELIBAto, etc. á todos los incrédulos. Unos son deistas, otros ateos;
 CR 30 CR
estos materialistas, aquellos escépticos ó pirrónicos; las; nosotros no podemos hacer mas que indicarlas
tolerantes los unos, intolerantes los otros, etc. sumariamente; para desenvolverlas serian necesarios
Una doctrina revelada, contraria á las preocupa muchos volúmenes; pero se tratarán mas estensa
ciones y á las inclinaciones de la naturaleza, destina mente en cada uno de los artículos á los que nos ve
da á subyugar el entendimiento y á reformar el co mos precisados á remitir al lector, y que irán aqui
razon no puede dejar de dividir á los lombres natu— señalados en caracteres itálicos. Propiamente hablan—
ralmente curiosos, vanos, disputadores y tercos. Ca do, todos los artículos de este Diccionario pertenecen
da uno, por vanidad, se lisonjea de entender mejor á este mas ó menos de cerca.
que otro, quiere tener razon, hacer adoptar sus opi “La revolucion verificada en el mundo por el cris
niones, ganar partidarios; muchas veces suele salir tianismo, dice en otro lugar Bergier (Tratado de la ver
bien, llega á ser gefe de secla, y quiere hacer ban— dadera religion), es el último rasgo de un plan seguido,
do aparte. Esta enfermedad empezó en las escuelas uniforme, constante en la Providencia. Asi como la
de la filosofia; fue introducida en el cristianismo por religion dada á los patriarcas era proporcionada al
disputadores indóciles y mal convertidos. Quisieron estado de infancia en que se hallaba entonces el gé—
hacer alianza á la doctrina de Jesucristo con sus opi nero humano; la que Dios habia prescrito por Moisés
niones filosóficas; en lugar de reformar estas por las era evidentemente relativa al estado de separacion y
luces de la revelacion, produjeron las diferentes he de guerra mútua, en que vivian las naciones ya for—
rejias que han á la Iglesia; casi desde su naci madas. El cristianismo, al contrario, se ha hallado
miento Jesucristo lo predijo, y los apóstoles nos pre esactamente análogo al estado de sociedad y de co—
vinieron contra este escándalo. No es á los sucesores mercio al que habian llegado los pueblos cuando Je
de los que lo han producido á quienes toca objetár sucristo vino al mundo.
noslo; ¿ mismos lo perpetúan y trabajan para ha Dios habia instruido á los patriarcas inmediata
cer el mal incurable. ¿De dónde han venido las here mente por sí mismo; se dió á cohocer á los hebreos y
jías, sino de su fondo de incredulidad? á las naciones vecinas por medio de prodigios que
Se sabe en qué consiste el cristianismo ó la pre inspiraban terror; por el ministerio de su Hijo único
dicacion de los apóstoles? Estos han dicho: Jesucris— no ha esparcido mas que beneficios. El objeto de los
to, Hijo de Dios, ha enseñado tal doctrina, y nos ha milagros del Salvador era ilustrar los entendimientos
mandado predicar tales verdades. Dijeron á los pas— ganando los corazones. Su doctrina, su moral, sus
tores que establecieron: Guardad fielmente la doc— promesas enteramente espirituales, hubieran hecho
trina que os hemos confiado, y enseñadla á los de— poca impresion en los hombres todavía medio sal
mas: Il Timot., c. 2, y . 2. Aqui la filosofia, la cu— vajes; podian hacer mucha mas en los pueblos civi
lizados y mas dóciles por la cultura de las ciencias y
riosidad, el furor de dogmatizar no tienen nada que de
ver; ó es necesario creer á los apóstoles y sus suce las artes.
sores, ó uno no es cristiano. Si alguno quiere esta Para probar que nuestra religion es obra de la ca
blecer su fé, crearse un sistema, escoger las opinio sualidad, ó de algunos hombres mañosos es necesario
nes á su gusto, y no cree en la palabra de Dios empezar por demostrar que desde la creacion, la
sino en sus propias luces, es herege y no fiel. ¿Por— Providencia divina no ha intervenido en nada en el
qué ha dado lugar este método á las disputas? Por establecimiento y conservacion de la verdadera reli
que se han rebelado contra él. Uno dice: yo no quiero gion. Cuando la filosofia considera al cristianismo co
creer mas que lo que está escrito, y quiero enten mo un edificio aislado que no conduce á nada, como
derlo corno me plazca. Y ¿ dice otro, no quiero un acceso de demencia que se ha apoderado de re
creer mas que lo que concibo: Dios mismo no tiene pente de una gran parte del género humano, demues
derecho de hacerme creer lo que yo no comprendo. tra que sus miras son muy limitadas, y que ni aun
Yo, dice un tercero, no quiero creer todo lo que creen conoce el sistema que se atreve á atacar.
los demas, quiero tener un sistema mio. Con tales Damos por primera prueba de la divinidad del cris
disposiciones, ¿es uno cristiano ó incrédulo? Es tan tianismo el enlace que se halla entre las tres épocas
absurdo atribuir al cristianismo esta terquedad como de la revelacion. La que Dios habia dado á los pri
á la razon las eslravagancias de los falsos razonado meros hombres desde el principio del mundo estaba
res. V. DispUTA, IIEREJIA. destinada á fundar la sociedad natural v doméstica
convenia á las familias nacientes que no podian formar
(“ristianismo. Religion que estableció Jesu todavia poblaciones considerables. La segunda, de la
cristo á quien reconoce y adora como Hijo de Dios y que fué órgano Moisés, tendia evidentemente á esta
blecer entre los descendientes de Abrahan una so—
Redentor de los hombres. Ilace cerca de diez y nueve
siglos que principió, y su establecimiento ha verifica ciedad nacional, á fundar sobre la misma base la reli
do una gran revolucion en la mayor parte del uni gion y las leyes; legislacion notable que Dios colocó
verso. Se pregunta en el dia si esta religion es obra espresamente en el centro del universo conocido, y
de Dios, ó una invencion de los hombres, si ha hecho que debia haber servido de modelo á todos los pue
en el mundo mas bien que mal; esta duda no puede blos. La tercera revelacion ha sido dada por Jesucris
proponerse sino por hombres muy mal instruidos, ó to, cuando las naciones se han hallado suficientemen
determinados á cegarse á sí misinos. te civilizadas para formar entre ellas una sociedad re -
La primera cuestion es saber cuáles son las prue ligiosa universal, y tal fué su designio cuando man
bas, ó cuáles los motivos de credibilidad que deben do á sus apóstoles enseñar á todas las naciones. Asi
empeñará un hombre sensato á adherirse á ellas; una de estas revelaciones ha servido de preparacion á
los que las atacan, las ignoran ó afectan desconocer la otra; todas han sido análogas al estado en que se
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hallaba el género humano, Dios ha hecho caminar la fista. Se dice que inventó la moral; otros antes que él
obra de la gracia al mismo paso que la de la natu la habian puesto en práctica; no hizo mas que decir
raleza. lo que habían hecho, no hizo mas que escribir sus
Hé aqui lo que los enemigos del cristianismo no ejemplos. Arístides fue justo antes que Sócrates hu
han comprendido jamas; lo consideran como si hu— biese dicho lo que era la justicia: Leonidas habia
biese caido de las nubes, como si no tuviese ni títu muerto por su páis antes que Sócrates hubiese hecho
los originales, ni relacion con nadie; no ven que es un deber el amor de la patria : Esparta era sóbria
un plan preparado desde la creacion del mundo. antes que Sócrates hubiese alabado la sobriedad: an
2." La segunda prueba con las profecias que lo tes que hubiese alabado la virtud, abundaba la Grecia
han anunciado. Es tambien una cadena que empezó en hombres virtuosos; pero Jesucristo entre los suyos
en Adan, ha continuado durante cuarenta siglos ¿dónde habia aprendido aquella moral pura y eleva
ha terminado en Jesucristo. La claridad de las profe da, de la que él solo ha dado lecciones y ejemplo?
cias va siempre en aumento á medida que se acercan Del seno del fanatismo mas furioso se hizo oir la mas
los sucesos, y su sentido en fin se descubre por su elevada sabiduría, y la sencillez de las mas heróicas
cumplimiento. Una no ha podido servir de modelo virtudes honró al pueblo mas vil de todos. La muerte
para ora, todas anuncian acontecimientos que Dios de Sócrates, filosofando tranquilamente con sus ami
solo podia efectuar. Aqui los incrédulos todavia se gos, es la mas dulce que se puede desear; la de Jesu
alucinan ó quieren aparentarlo. No consideran las pro cristo, espirando en los tormentos, injuriado, escar—
fecias sino aisladamente; afectan no ver que el con— necido, maldecido de todo un pueblo, es la mas hor
junto es lo que las da su mayor fuerza. rible que se puede temer. Sócrates, tomando la copa
3.” Una prueba todavia mas manifiesta es el ca envenenada, bendice al que llorando se la presenla:
rácter augusto de Jesucristo, la sabiduria de sus lec Jesus, en medio de un suplicio afrentoso, ruega por
ciones, la sublimidad de su doctrina, la santidad desus verdugos encarnizados. Sí, si la vida y la muerte
su moral, el heroismo de sus virtudes, el esplendor de Sócrates fueron de un sábio, la vida y la muerte
de sus milagros. ¿Donde está el legislador, el funda de Jesus fueron de un Dios. - -

dor de una religion que ha reunido en su persona Diremos que la historia del Evangelio está inven
tantos signos de una mision divina? A él solo se le ha tada al capricho? No es asi como se inventa; y los
concedido la cualidad de Hijo de Dios, pero tampoco hechos de Sócrates, de los que nadie duda, están me
le ha faltado ninguno de los caracteres que podían nos atestiguados que los de Jesucristo. En realidad es
convenir á un Dios hecho hombre. evadir la dificultad sin destruirla. Seria mas inconce
El mismo J. J. Rousseau ha dicho: «El Evan bible que muchos hombres, de acuerdo, hubiesen fa
gelio, este libro divino, el único necesario á un cris bricado este libro, que no que uno solo haya dado su
tiano, y el mas útil de todos al que no lo fuese, no asunto. Nunca los autores judios tuvieron este estí
hay necesidad mas que de meditarlo para inspirar en lo ni esta moral; y el Evangelio tiene caracteres de
el alma el amor de su autor v la voluntad de llenar sus verdad tan palpables, tan erfectamente inimilables,
preceptos. Nunca ha hablado la virtud lenguaje tan que el inventor seria mas digno de admiracion que el
dulce, nunca la sabiduria mas profunda se ha espre héroe. - -

sado con tanta energia y sencillez. No se deja su lec— .." La predicacion de los apóstoles y las circuns
tura sin sentirse mejor que antes. tancias de que ha ido acompañada, sus cualidades
«Ved los libros de los filósofos con toda su pompa personales,
táculos que la certidumbre
tenian de sulatestimonio,
que vencer, duracion delosSulobs
l'0-
cuán pequeños son al lado de estel ¿Es posible que un
libro á la vez tan sublime y tan sabio sea obra de los sultado, º muerte que padecieron para sellar la ver
hombres? ¿Es posible que aquel cuya historia hace él dad de los hechos que anunciaban, el modo como el
mismo no sea mas que un hombre? ¿Es aquel el esti cristianismo ha sido impugnado y la manera con que
lo de un entusiasta ó de un sectario ambicioso? ¡Qué se ha defendido, las revoluciones sucedidas en la
dulzura, qué pureza en sus costumbres! qué gracia continuacion de los siglos que parecian destruirlo, y
tan tierna en sus instrucciones qué elevacion en sus que de hecho han contribuido á su propagacion.
máximas que profunda sabiduria en sus discursos Ñuestros antiguos apologistas, Orígenes, S. Justino,
qué presencia de ánimo, que delicadeza y que exac Tertuliano, Lactancio ya habian hecho valer esta
titud en sus respuestas qué imperio sobre sus pasio prueba; pero ha llegado á ser mucho mas fuerte por
nes! ¿Dónde está el hombre, dónde está el sabio que la sucesion de los tiempos. -

sabe obrar, sufrir y morir sin debilidad y sin osten—
lacion? Cuando Platon pinta su justo imaginario cu—
bierto con todo el oprobio del crimen y digno de todo
el precio de la virtud, pinta esactamente á Jesucristo;
la semejanza es tan manifiesta que todos los PP. la
han conocido y que no es posible engañase en ella.
El designio mas hermoso por su objeto, mas
vasto por su estension, mas sorprendente por eléc
sito, dice Mr. Frayssinous, es el designio concebido
hace diez y ocho siglos por esucristo de establecer la
religion cristiana en medio del paganismo, y renovar
con ella la faz de la tierra. - -

¡Qué preocupacion, que sequedad no se necesita La propagacion rápida del Evangelio en medio de
tener para atreverse á comparar el hijo de Soronisco las naciones idolatras hacia decir á S. Clemente de
con el Hijo de María Qué distancia entre uno y otrol Alejandría, Strom., l.6, c. 18: «Los filósofos grie
Sócrates, muriendo sin dolor, sin ignominia, sostuvo gos no se han acredilado mas que entre sus compa
facilmente hasta el fin su papel; y si aquella muerte triotas, y aun no han sido conocidos de todos; Pla
facil no hubiera honrado su vida, se dudaria si Só ton se ha hecho discípulo de Socrates, Xemócrates de
crates con todo su ingenio fue otra cosa que un so Platon, Teofrasto de Aristóteles, Cleanto de Zenon,
TOM10 I , 7.
 CRI (542 CR

Estos filósofos no han persuadido sino á algunos de do citará Lampridio, in Alear. Sever., 3, autor pa
sus sectarios. Pero la palabra de nuestro Maestro no gano de la vida de Alejandro Severo; este príncipe
quedó en el recinto de la Judea, como la filosofía en favorable á los cristianos habia concebido el desig
los límites de la Grecia; se ha esparcido en toda la nio de hacer edificar un templo á Jesucristo; pero le
tierra en medio de los bárbaros cómo de los griegos; disuadieron los sacerdotes de los falsos dioses asegu
ha llevado la persuasion á las naciones, á las villas, rándole que si ejecutaba este proyecto, todo el mun
á las ciudades enteras; ha conducido á la verdad un do se haria cristiano, y que quedarian desiertos los
gran número de los que le han oido, y aun de mu demas templos; arrastrados todos los paganos corre
chos filósofos. S. Justino (Dial. cum Tryphr.; n. 117), rian en tropel á la iglesia cristiana; tanto temor ins
decia, solamente cincuenta años despues de la muer piraba la grande multiplicacion de los cristianos á los
te de S. Juan Evangelista: «Pongo por testigo á los sacerdotes de los ídolos del que el cristianismo llegase
diferentes pueblos de la tierra, griegos ó barbaros, á ser universal. Puedo citar hasta los edictos de los mis
ó de cualquiera otra secta de hombres, cualquiera mos emperadores. Eusebio, escritor contemporáneo,
que sean sus denominacionos ó sus costumbres, cual nos ha conservado dos edictos de Maximino II. El pri
quiera que pueda ser su ignorancia en las artes y en mero es un edicto de persecucion que Eusebio leyó
la agricultura, ora que habiten bajo de tiendas, ora en Tiro, grabado sobre una columna, Hist. eccles:
que errantes en medio del desierto trasporten su mo l. 9, c. 7; el tirano deploraba en él los males del
rada en carros cubiertos; no hay naciones entre las imperio causados, segun decia, por el error perni
que no se haya ofrecido al nombre de Jesucristo, ora cioso de los cristianos, el cual penetrando en los
ciones al Padre y al Criador de todas las cosas.» Sa espíritus, habia esparcido las tinieblas en casi todo el
hemos por Arnóbio (Adv. gentes, l. 2, c. 12), y por universo; universam prope direrim orbe , terrarum
Eusebió (Demontr. evang., l. 3, c. 3), que el Evan confusione quadam oppressit. El segundo dice, ibid.,
gelio en los tres primeros siglos se habia estendido c. 9, que es una carta de tolerancia inspirada por
mucho mas allá de la dominacion romana entre los la politica, en la cual refiere Maximino al principio
persas, los partos, los escitas, etc. En cuanto al im que los emperadores Diocleciano y Maximiano se
perio romano en particular, «no somos mas que de vieron obligados á usar de rigor con el cristianismo,
ayer, escribia Tertuliano (Apoloq., c. 39), y llena viendo que casi todos los hombres abandonaban el
mos todo vuestro imperio, las ciudades, las islas, los culto de los dioses para hacerse cristianos: omnes fe—
castillos, las aldeas, los tribunales, los campos, las ré homines relicto deorum cultus. Ahora os pregunto:
tribus, las decurias, los palacios, el senado, el foro, ¿todos estos monumentos de la antigüedad pagana y
no os dejamos mas que vuestros templos; aun podria cristiana no prueban que aun antes del reinado de
mos sin armas y sin rebelion, sino únicamente por este príncipe, era muy grande el número de los cris:
nuestra separacion, combatiros. Si siendo una multi tianos en las diversas provincias del imperio romano?
ud tan numerosa nos relirásemos á cualquiera parte Una vez probada la rapidez de la propagacion del
del universo, se confundiria vuestra dominacion con Evangelio, es fácil demostrar todo lo que tiene de
la pérdida de tanto número de ciudadanos; solo admirable.
nuestro apartamiento os castigaria, os estremece— Enseñar á los sabios por los ignorantes, vencer á
riais de la soledad en que os dejaria este silencio uni los poderosos por hombres débiles, atraer á la multi
versal, y del estupor en que quedaria vuestro uni tud combatiendo sus vicios, ganarse discípulos prome
verso como muerto.» Escribiendo á Scapula, gober— liéndoles sufrimientos, oprobios, desprecios y la muer
nador del Africa, Tertuliano decia tambien: «Somos te, destronar á todos los dioses del Olimpo para ha
casi la mayor parte de cada ciudad, pars pene major cer adorar en su lugar á Jesucristo clavado en una
civitatis cuyusque.» Asi los antiguos apologistas de la cruz como un malhechor y el mas vil de los esclavos;
religion se han aprovechado en su favor de su sor todo esto era humanamente imposible, y esto es
propagacion como de nn hecho muy bri precisamente lo que ha sucedido, y la locura de la
lante, muy notorio, que nadie disputaba para ha cruz ha triunfado del universo.
Cel COI)0Cer ue habia una fuerza enteramente di De cualquier modo que se considere la religion,
vina, propia subyugar los espíritus y reformar los bien en las personas de los que primero anuncia
COTaZOn623. ron, bien en la doctrina que enseña, ya en la época
La antigüedad pagana, lo mismo que la antigüedad en que apareció, es forzoso convenir en que desde su
sagrada atestigua este hecho: «Puedo, dice, Mr. Frays origen todo estaba contra ella y nada á su favor, de
sinous, citará Tacito Annal., l., 15, c. ), que suerte que hubiera debido sucumbir y perecer, si
nos enseña que desde el origen del cristianismo, en una mano divina no la hubiese sostenido.
tiempo de Neron, se admiraron de descubrir en Ro El cristianismo naciente, tenia contra sí á sus mis
ma una multitud tan grande de cristianos, multitudo mos fundadores: estos eran hombres ignorantes, des
ingens. Puedo cilar á Plinio el jóven gobernador de preciables en apariencia, que naturalmente habia de
Bitinia 10, epist. 97); al rededor de 60 años des rechazar un mundo soberbio y desdeñoso.
pues de las primeras predicaciones de los apóstoles, es— Tenia contra sí su propia doctrina; humillante para
cribia al emperador Trajano que el cristianismo era el entendimiento, repugnante para el corazon de
profesado por un gran número de personas de toda bia naturalmente ser rechazada por el orgullo y la
edad y condicion, omnis ordinis; que este nuevo culto sensualidad.
se habia propagado como un contagio, no soloá las ciu Tenia contra sí á la misma época en que apareció,
dades, sino á las aldeas y á los campos; de modo que ha es decir, del siglo d Augusto, en que las luces bri
bia hallado los templos de losdiosesabandonados. Pue llaban en Europa y en Asia, y en el que la religion
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Venia que sostener continuamente los ataques de una tatas: casi tanta ventaja sacamos hoy de los escritos
multitud de filósofos, de retóricos y de literatos que de nuestros enemigos, como de las obras de nuestros
estaban esparcidos en todos los paises de Oriente y apologistas.
Occidente. 6." Si examinamos el cristianismo en sí mismo,
Si, pues, no teniendo á su favor nada de lo que ase qué encontramos en él? Dogmas sublimes, una moral
gura el buen éxito de las empresas humanas, sino es santa, un culto magestuoso y puro, una disciplina se
tando todo contra él, preocupaciones del entendimien vera. Todas estas partes se sostienen y se apoyan
to, pasiones del corazon, fuerza de las costumbres, mútuamente; sin nuestros misterios, en nada se fin—
autoridad del ejemplo político de los gobiernos, se daria la moral; los unos y la otra serian desconocidos,
fundó á pesar de todo; el cristianismo y su triunfo es si las prácticas del culto no los recordaran continua—
el monumento eterno de su divinidad. mente; el culto seria bien pronto alterado, si la dis—
Para empañar la gloria que resultó al cristianismo ciplina no velase por su conservacion.
del hecho de su establecimiento creen esplicarlo todo 7." Todo esto reunido se refiere á la enseñanza
los incrédulos, con las palabras prestigio de la nove viva y pública de la Iglesia: la misma es para los sa
dad, entusiasmo irreflerivo, fanatismo, espiritu de bios que para los ignorantes; todos encuentran alli
partido, credulidad y supersticion. sin dificultad la unidad, la universalidad, la inmuta—
¿La novedad? Aun cuando una doctrina sea nueva, bilidad de la fé. Veinte sectas que se han separado
no se hace con facilidad prosélitos, sino se hermana de ella no han hecho mas que afirmar y dar mayor
con los gustos y las inclinaciones de aquellos á quie brillo á esta enseñanza; sirven hoy de testimonio de
18S S6 antl ICla. de lo que se creia y enseñaba en la época de su sepa
¿Un entusiasmo irrelecsivo? El delirio piadoso que racion.
de las delicias del paganismo convierte á la severidad 8.º Qué efectos no ha producido esta divina reli
del cristianismo á todos los pueblos, á todas las eda gion en todos los climas? la hecho la misma revolu
des, á todas las clases, haciendo á los hombres mas cion en las costumbres y la civilizacion en Europa
ilustrados y mejores, se asemeja mucho á la mas alta que en Asia, en el Africa que en el Norte; ningú
sabiduria. na nacion la ha abrazado que no haya salido al mo
¿El fanatismo? Los fanáticos son violentos, y los mento de la barbarie, y ninguna la ha abandonado
cristianos solo supieron morir. que no haya caido en ella. Despues de mil selecientos
¿El espíritu departido? Este puede inspirar algu años hay siempre la misma diferencia entre las nacio
nas acciones brillantes, algunos sacrificios de osten— nes cristianas y las que no lo son. . . .
tacion; pero la constante fidelidad á los mas ocultos 9º Cuando comparamos el cristianismo con las
deberes, esa diaria continuacion de acciones sencillas demas religiones antiguas y modernas, con la creen
y modestas, solo una religion sincera puede hacerlas cia de los chinos, de los judios, de los parsis, de los
practicar. El espíritu de partido puede producir fari ejipcios, de los griegos, de los mahometanos nº es di
seos, pero de seguro n o producirá Vicentes de Paul. ficil distinguir la que viene de Dios, de las que han si
¿La credulidad y la supersticion? Si el aparato de do forjadas por los hombres: todas estas últimas se
las promesas y de las amenazas del cristianismo afec resienten del terreno bajo el que nacieron; la nuestra
ta á los que tienen fé en su verdad, los incrédulos se no tiene mas relacion con una parte del mundo que
burlan de ellas. La primera idea de los paganos debia con la otra.
ser burlarse de los apóstoles y de su doctrina. «Tam— 10. En fin, una prueba no menos palpable que
bien nosotros, les decia Tertuliano convertido (Apo— las precedentes acerca de la verdad del cristianismo,
logia), nos hemos burlado como vosotros de la doctri es la série de errores en que inevitablemente se cae,
na cristiana. Los hombres no nacen cristianos, se ha una vez alejados del camino que nos traza; y de las
cen». Y siempre tenemos el derecho de preguntar, verdades que nos enseña: los que rehusan sufrir el yu
cómo se han hecho los paganos, dice Mr. Frayssi go de la fé pasan rápidamente de la heregia al soci
nuos. Estamos en el caso de repetir con S. Atanasio: nianismo y al deismo, de este al ateísmo y materia
(de incarn. Verbi, núm. 7). «Los filósofos con sus lismo, para venirá parar en un pirronismo absoluto.
voluminosas obras solo han podido persuadir á un pe Esta progresion es inevitable á todo el que se precie
queño número de discípulos sus dogmas sobre la in de razonar con consecuencia. Sin duda se pudieran
mortalidad del alma, y el modo de vivir bien: y Je— añadir á estas otraspruebas; cuanto mas se estudia
sucristo con palabras comunes, con hombres ignoran la religion, mayores se encuentran. Puesto que hayun
tes, ha persuadido á un gran número de Iglesias en Dios, no ha podido permitir que una religion falsa tu
toda la tierra á despreciar las cosas temporales y la viese tantas señales de verdad; hubiera entonces ten
muerte para apreciar solo las cosas eternas». dido un lazo inevitable á los entendimientos rectos y á
Asi, lejos de empañar los sofismas de la increduli los corazones virtuosos.
dad la gloria que produce al Evangelio, su maravilloso "Señor, decia Ricardo de S. Victor De trinitate,
establecimiento en medio de las naciones paganas, la libro 1, c. 2, si creyendo en el cristianismo me enga
dejan en todo su
5."
¿
El testimonio dado por los mártires á los he
-
ño, vos mismo me engañais porque está señalado con
caracteres que solo vuestra mano puede imprimir:
chos en que está apoyado el cristianismo y á la san Domine, si error est á te ipso decepti sumus.)
tidad de esta religion que abrazaron con pleno cono Entre el gran número de incrédulos que han aven
cimiento de causa; tesimonio confirmado por los mis turado la proposicion de que no son sólidas las prue
mos ataques de los filósofos, por las confesiones bas del cristianismo, todavia no se ha encontrado uno
forzadas de los herejes, por la conducta de los após solo qne se haya atrevido á destruirlas una por una,
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y á presentar un sistema mejor razonado. No conoce un griego, de un romano, ó de un galo para instruir
una haya procurado demostrar que á los hombres, salvarlos y santificarlos. A los judios
mos
hay en mundo que
unoelsiquiera religion falsa, que ueda ale se habia profetizado que ¿ Mesias seria Hijo de Da
gar en su favor los mismos motivos de credibilidad que vid y de Abraham, y está probado por su genealogia
el cristianismo. Es cierto que á todas estas pruebas se que Jesus descendia indudablemente de estos patriar—
han hecho objeciones; pero estas prueban mas la pre cas; y habia una sangre mas noble en el universo?
vencion y la obstinación de nuestros adversarios que Es falso que Jesus no encontrase creyentes entre los
- su sagacidad. Afirman nuestros argumentos en vez de judios, puesto que en la Judea se empezóá establecer
debilitarlos. -
el cristianismo. Jesucristo fue condenado á muerte,
Preguntar que por qué Dios ha hecho tres revela no por haber cometido ningun crímen, sino por ha
ciones, cuando pudiera haber producido el mismo berse atribuido la cualidad de Mesias y de Hijo de
efecto por una sola; por qué no hizo al principio del Dios; la cuestion es saber si no lo probó por su doc
mundo lo que queria hacer cuatro mil años despues, trina, por sus virtudes y por sus milagros. En este
esto es lo mismo que preguntar por qué Ull padre caso el proyecto formado por sus discípulos de hacerlo
no da á su hijo al salir de la cuna las mismas leccio reconocer por Dios después de su muerte, hubiera si
nes que le prepara á la edad de quince años; por qué do el mas insensato que jamás cabeza humana pudo
Dios no face nacer á los hombres en una edad ma— concebir, y les habria sido imposible llevarlo á cabo.
dura, en vez de hacerlos nacer en la infancia? Por Si Jesucristo probó su mision y su divinidad, no nos
qué no crió Dios el mundo Cuatro, veinte o cien mil debe admirar el éxito; pero quisiéramos que nos di
años antes; por qué no dió el será cien millones de jeran los incrédulos cómo lo hubiera conseguido de
como otro modo.
hombres mas; por qué no los hizo tan perfectos
los ángeles? Todas estas preguntas son absurdas, por Aun les hariamos otra pregunta; á saber, cuál de
que van hasta lo infinito. estos dos misterios es mas fácil de concebir; el que
Dios, á cuyos ojos la duracion de los siglos no es Dios para instruir, redimir y santificar á los hom
mas que un instante en la eternidad, debia apresu— bres se dignase revestirse de la humanidad, apare—
rarse á cumplir sus designios. ¿Qué importa que con— cer bajo el aspecto de un artesano de la Judea, dejarse
cediese á los primeros hombres menos luces, menos crucificar y resucitar despues, ó el que Dios permi
gracias; menos medios de salvacion que á nosotros, tiese que un vil artesano de la Judea, reuniese en su
si á nadie ha pedido jamás cuenta, sino en propor persona todos los caractéres capaces de hacerley re
cion de los auxilios que le habia dado? conocer por el Mesias º á los judios, por
La igualdad de los beneficios naturales ó sobrenatu el Hijo de Dios; que haya logrado ser adorado por
rales para todos los tiempos repugna tanto á la sabi una gran parte del linage humano, y que esta ilusion
duría divina, como la igualdad para todos los luga dure despues de diez y ocho siglos. . -

res, para todos los pueblos y para todos los indivi No han sido mas justos con los apóstoles los enemi
duos. Véase DESIGUALDAD. Han dicho los incrédulos gos del cristianismo; les han atribuido un carácter
que para sacar una prueba de las profecias es nece— indefinible y cualidades contradictorias; una ignoran
sario entenderlas en un sentido místico, alegórico, cia estúpida y astucias impenetrabes; una groseria
figurado, muy diverso del que los profetas les quisie sin igual y una prudencia consumada; un interés sór
ron dar, que no es otra cosa que un desvario de los dido y un valor heróico; un fanatismo repugnante y
comentadores judios ó cristianos. un celo ardiente por la gloria de Jesucristo; una mal
Nosotros sostenemos lo contrario, y en cada pro dad decidida y el deseo de santificar el mundo; una
fecia que aducimos en prueba, hacemos ver que tal ciega tono ambicion y la sed del martirio. Con mas mo
es el sentido literal, directo y natural; se pueden de desto deberían hablar unos razonadores reduci
jará un lado las profecias típicas y alegóricas, sin dos á tan estremo absurdo.
que pierda nada el cristianismo, y sin que se pueda Cómo no han notado que á medida que exajeran
criticar á los PP. y apóstoles de la Iglesia, que tu los vicios del entendimiento y del corazon de los após—
vieron buenas razones para alegar á los judios las toles, aumentan lo maravilloso de su éxito? Unos
profecías típicas en el mismo sentido que les daban groseros ignorantes jamás hubieran enseñado tan su—
sus doctores. V. ALEGoRIA, FIGURismo, Tipo. blime doctrina, no nos hubieran dejado tan sábios es
Para alacar el carácter personal de Jesucristo ha critos, no hubieran atraido á su escuela sábios y filó
sido necesario escederen malignidad á los judios, des sofos. Hombres esencialmente viciosos no hubieran
naturalizar sus acciones y sus discursos, emponzoñar predicado una moral tan perfecta, ni hubieran dado
sus intenciones y sus motivos, alterar la narracion ejemplo los primeros. Si hubieran sido ambiciosos
de los evangelistas, falsificar los pasajes, etc.; pro ó interesados, cada uno hubiese trabajado para sí;
ceder indigno y odioso que deshonra á los incrédu no hubiera querido entenderse con los demas, y hu
los, y basta para hacer detestar sus opiniones. hiera formado bando aparte, como lo han hecho los
Ilan dicho con un tono de desprecio que Jesus no fundadores de la pretendida reforma. Si solo hubieran
fue mas que un vil artesano de Judea, que no pudo trabajado para este mundo, habrian evitado en cuanto
hallar quien le creyese entre sus compatriotas, que les hubiera sido posible las persecuciones y la muerte;
fue muerto como un sedicioso y malhechor, y del que como tambien lo hacian los sectarios del siglo XVI y
algunos fanáticos imaginaron hacer un Dios despues los doctores de la incredulidad.
de su muerte. En fin, si hubieran sido una porcion de fanáticos,
Desde luego quisiéramos saberpor qué Dios habia de hubieran producido un caos de opiniones diferentes,
servirse con preferencia á un judio de un caldeo, de como hizo el protestantismo desde su orígen, y como
 CR
CRI (545)
do que la constancia de los mártires en medio de
ha sucedido á las demas heregías que han subsistido los mas crueles tormentos era natural. Unos pue
largo tiempoo. embarazo han encontrado nuestros ad blos acostumbrados á ver correr sobre la arena la
El mism sangre de los gladiadores, á recrear sus ojos con el
versarios, cuando ha sido necesario esplicar las cau espectáculo de un hombre que moria por su gusto,
sas de la propagacion del Evangelio y de la conver á escitar cen sus gritos la crueldad de los verdugos
sion del mundo. A los ojos de un hombre sensato estas no estaban seguramente muy inclinados á la piedad.
causas son evidentes. 1 º La fuerza persuasiva que Je Pedi an á gritos el suplicio de los cristianos, no por—
sucristo prometió dar á sus apóstoles. Luc., c. 21, que los compadeciesen, sino por satisfacer su propia
ina
x. 15.)2." La santidad de su doctr y la subli midad rie. Muchas veces, magistrados, que por otra
de su moral. 3." Los milagros que hicieron y el poder barba
parte estaban poco dispuestos á alormentar á los cris
r
que tuvieron de comunica á fieles el don de ha lianos, se veían obligados á castigarlos por satisfacer
cerlos. 4." El espíritu profético y el conocimiento de un populacho desenfrenado. Convenimos en, que,
los mas secretos pensamientos de los hombres. 5 º La ásegu n la espresion de Tertuliano, la sangre de los
caridad heróica, su valor, su desinterés y su pacien mártires era semilla de cristianos; pero es absurdo
cia. 6." Las mismas virtudes que hicieron reinar en
tre los primeros cristianos. creer que este fenómeno era natural. Se vió que la
Mas los incré dulos han ator ment ado su razon para persecucion ejercida por Alejandro contra los magos,
nos a das, por muchos em
buscar causas naturales á esta revolucion y hacer por los roma contr los drui
desaparecer lo maravilloso de ella; no podemos dejar peradores contra los judios, por algunos soberanos con
de discutirlas, al menos brevemente. Han dicho: tra los mahometanos, aumentase en algo el número
1." Que todos estaban cansados de las fábulas, su de sus partidarios? . .

persticiones y desórdenes del paganismo; que la in 4.° Estaban preocupados con los prodigios y los
constancia y el deseo de novedades inclinaron á mu milagros, dicen nuestros profundos razonadores, y
chos á abrazar el Evangelio. Pero los edictos de los los predicadores del cristianismo hacian, alarde de
empe rado res reno vado s por espac io de mas de dos obrar los. Sostenemos que, en efecto, los hacian: los
cientos cincuenta años para mantener la idolatria; judios, Celso y otros paga
nos convienen en ello:
pero los atrib uían
la apologia del paganismo hecha por muchos filóso— natural, y los verdaderos milagEsto
á la magi a. no es una causa
ºs en este mismo tiempo, y sus sangrientos escritos no destruyeron á la ventura ros de los cristianos
contra nuestra religion; los gritos tumultuosos de los de los paganos. Si los misioneroslos falsos prodigios
paganos en el anfiteatro pidiendo la sangre de los de milagros como los apóstoles y los prim tuvie ran hoy el don
eros cristia
cristianos; los suplicios de estos, no interrumpidos drian os tados .
o
desde Neron hasta Constantin , son pruebas del dis nos, obten los mism resul
-

gºsto por el paganismo, y de un gran apresuramien celo5."ardie Nuestros adversarios convienen en que el
lo por cambiar de religion? Podia hacer algo mas el dores no podia nte é infatigable de estos primeros predica
n menos de hacer un gran número de
fanatismo mas obstinado º prosé litos . Démo sles gracias por esta conlesion; pero
No hay mas que leer en Minucio Felix la apología tan desinteresado; tan infatigable
que un pagano hace del polit eismo y de la idola tria, un celo tan puro,
y se verá si el mund o estab a cans ado de ella. Véas e como el de los apóst oles y sus discípulos no se encuen
tra en la naturaleza: no podia venir de ningun molivo
PAGANIsmo, S. 10. ni pasion humana. En vano se buscará entre los fun
2. Queen medio de las desgracias que abrumaban dado res de las falsas religiones un celo como el de los
al imperio, los pueblos tenían necesidad de una reli
gion que les enseñase á sufrir. Indudable es que te— apóstoles y acom pañado de las mismas virtudes.
6." Dice n
nian necesidad de ella; pero si lo conocian, ¿cómo dogma interesante persu
que adieron á los ánimos con el
resistieron tanto tiempo? Estas desgracias se atribuían de la vida futura; que movieron
al cristianismo y á la ira de los dioses irritados con los corazones con su moral sublime, con su dulzura
ra los cristianos; S. Agustin se vió obligado despues y con su caridad; que esta misma virtud, ¿?
de cuatrocientos años á escribir todavia contra esta por los primeros fieles, fue un atractivo sobre todo pa
preºcºpacion. Por otra parte, sufrir por los moti ra los pobres y los desgraciados: nuevo homenaje en:
vos sobrenaturales que ofrece el cristianismo no es Un dido por los incrédulos á la santidad del cristianismo;
pero esta misma sanlidad hubiera podido hallarse y
proceder natural. ié aquí un homenaje que nues rvarse entre hombres culpables de imposturas,
tros adversarios se han visto obligados á rendirá conse de otros vicios de ¿ se han atrevido á
ºestrº religion. Consoló á los pueblos en el esceso acusar áeslosy apóst
de frand
oles? Cuando el dogma de la vida fu
de su desgr acia, y les ense ñó á sufri r con valor ; y si
estab a combatido por las fábulas del paganismo,
hemos de creer en una Providencia , forzoso es con— tura las disputas de los filósofos, y por los errores de
esar que no pudo enviar mas á tiempo este consue por
lo. Bién pronto los bárbaros vinieron a poner el col los saduceos; cuando la moral de unos y de otros es
º á las desgracias que el imperio romano habia su taba tan corrompida como las costumbres públicas,
pescadores de la Judea aduniraron al universo
frido por parte de sus señores. Esperaremos, pues, doce la imidad de sus lecciones y con la, santidad
que cuando los incrédulos tengan que sufrir alguna de sus subl
con
ejemp los. Si este es un prodigio de la gracia,
cosa se harán cristianos.
n rada n ¿dónde los encontraremos
3." Pretende que la decla perse cucio con
proyecto de dar una misma ¿ º dS ocur s
(, Al principio del siglo II, reputaba
tra los cristianos los hizo interesantes , que la piedad el a
natural les ganó partidarios, á quienes conmovieron
con su constancia. Seria necesario empezar proban leyes á los pueblos de las tres partes del mundo co
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546 CRI
nocido entonces; y sin embargo, este proyecto se eje jar otra. Esto dijeron Platon, Varron, Ciceron, Sé
cutó poco tiempo despues, y hoy se quiere probar que neca, Minucio Felix, etc.; su sentir, pues, mas bien es
esto se hizo naturalmente y que nada hay en ello de contrario que favorable al paganismo. No miraron de
maravilloso.
esta manera los doctores cristianos nuestra religion;
Muchos de nuestros adversarios han sostenido que la abrazaron porque la creyeron verdadera, y proba—
el cristianismo era deudor de estos progresos á la pro ron su verdad con tanta fuerza que convirtieron á su
teccion que le dispensaron los emperadores, á las le— vez á sabios y á filósofos; luego su testimonio es una
yes que dieron en su favor y á la misma violencia que prueba sólida y no una simple preocupacion.
usaron contra los paganos para hacerles cambiar de Algunos incrédulos que han aparentado examinar
religion. Probaremos lo contrario en la palabra EM los dogmas, la moral, el culto y la disciplina del
PERADoR. Es necesario no olvidar que para hacerse cristianismo, no han manifestado mucha buena fé:
cristiano tenia un judio ó un pagano que empezar cre han alterado nuestro símbolo y nuestros catecismos,
yendo los milagros de Jesucristo, sobre todo, su re— falsificado los decretos de los concilios, tergiversado
surreccion y ascersion al cielo: estos dos hechos son
dos artículos del símbolo de la fé cristiana. Ahora las máximas del Evangelio, comparado nuestro culto
bien, era facil, sobre todo, á los judios, convencerse de al de los paganos y desnaturalizado el objeto, los mo
tivos, los efectos de todas las leyes eclesiásticas. Tra
la verdad ó falsedad de los milagros de Jesucristo pu taremos de cada uno de estos artículos en particular.
blicados por los apóstoles. Si estos milagros no hubie Pero nuestros adversarios no han considerado el con
ran sido ciertos é invenciblemente probados, ninguna
de las causas de conversion de que acabamos de hahlar junto y su relacion; este carácter de verdad no se ha
lla en las religiones falsas; probaremos que no hay
p0dia empeñar á ningun prosélito á creer en los mi uno nuestros dogmas que no tenga relacion esen
lagros. Este es un carácter tan peculiar del cristianis cial de
con los demas, que no contenga consecuencias
mo, que no se encuentra en ninguna religion folsa. morales, que no apoye las prácticas del culto, y con
Se podia ser pagano sin creer en las fábulas del paga el que no tenga alguna relacion la disciplina: prueba
nismo, sectario de Zoroastres, sin informarse si habia
hecho milagros, musulman sin dar fé á los pretendi evident e de que una sabiduria mas que humana cons
dos prodigios de Mahoma, etc. Nuestros adversarios truyó todo este edificio. Ninguna secta que haya ala
no se dignan notar esta diferencia. cado alguna de estas partes, ha podido conservar las
demas en su integridad.
Cierran los ojos sobre los obstáculos que se oponian ¿De qué ha servido á los incrédulos repetir los so
á la propagacion del Evangelio. Era necesario obligar fismas y los clamores de los protestantes contra la
á los judios y á los paganos que se detestaban y se enseñanza de la Iglesia de que son órgano los pasto
despreciaban mútuamente, á ¿ y á formar
res? Ni unos ni otros han comprendido el verdadero
una sola Iglesia; acostumbrar á los señores á mirará estado de la cuestion. La infalibilidad que atribuimos
sus esclavos con corta diferencia como iguales suyos; á la Iglesia está fundada en el auxilió sobrenatural
enseñará los príncipes á respetar los derechos de la
humanidud. Era necesario hacer reformar todas las le que Jesucristo la prometió, que se une á la certidum
bre moral de esta misma Iglesia, certidumbre llevada
yes y las costumbres que lastimaban estos derechos al mas alto grado: lo probaremos en la palabra INFA
sagrados; cambiar las ideas, las costumbres, los há Ll BILIDAD.
bitos y las pretensiones de todas las clases; refundir, Aun cuando Jesucristo no hubiera prometido es
por decirlo asi, el caracter de todos los pueblos. Que presamente á su Iglesia una asistencia perpélua, nos
0s egipcios, los árabes, los sirios, los persas, los es - veriamos forzados á reconocerla en medio de las ter
cilas, los griegos, los habitantes de Italia y los de las ribles revoluciones acaecidas en el mundo en el espa
Galias, de la España y del Africa fuesen todos paganos, cio de mil ochocientos años. Persecuciones crueles,
esto, se concibe. Todos tenian sus dioses propios, sus herejías de toda especie, irrupciones de los bárbaros,
fábulas y sus fiestas particulares, usos y prácticas mezcla de pueblos, cambios en el lenguaje, en las cos"
análogas á sus costumbres; el cristianismo no dejaba tumbres, en las leyes, en los usos, destruccion de la
libertad en la creencia, variedad en la moral, dife mayor parte de los monumentos, ciencias y de
rencia en el culto esterior; proponia á todos un solo las artes, todo parecia conspirar ádelas
la total ruina del
Dios, una misma fé, un solo bautismo, una sola Igle cristianismo; ninguna otra religion ha sufrido tan
sia, Cuando se intenta persuadir que esta revolucion grandes borrascas, y no solo la nuestra subsiste, sino
se ha hecho naturalmente y sin milagro, se hace pro ue todo lo ha reparado y conservado. No es un pro
fesion de no conocer la naturaleza humana. lio que las otras se sostengan con la ignorancia y
Cuando presentamos á los incrédulos la multitud con corrupcion de costumbres: el cristianismo bus
de hombres ilustrados, instruidos y sabios, que abra ca lalaluz; sin cesar la difunde, y con ella se sostiene.
zaron el cristianismo y que escribieron para defender Para deprimir la enseñanza de la Iglesia, para ha
le, dicen que esla preocupacion nada prueba; que el cer sospechosa su tradicion han vomitado torrentes
paganismo con todos sus absurdos fue seguido y pro— de bilis los protestantes contra el clero; han presen
fesado por los hombres mas grandes. tado á los pastores de todos los siglos como un cuerpo
Pero lo profesaron por conviccion, por persuasion ó de prevaricadores, empeñados no en conservar lo que
solo por hábito? Ellos mismos conocian que el paga Jesucri sto estableció, sino en desnaturalizarlo; los in
nismo no está fundado en ninguna prueba; pero de crédulos, copiándolos servilmente, no han hecho mas
ºan que era necesario seguirlo porque sus antepasa que ecsagerar sus invectivas, sin perdonar siquiera
dos le habian transmitido, porque estaba autorizado á los sucesores inmediatos de los apóstoles. ¿Y cuál
Por las leyes, y porque seria temerario querer for ha sido el resultado de esto? Que nuestros diferentes
 CRI 547 CRI
adversarios se han dejado arrastrar de las pasiones, no se responde y se continúa declamando. Véase AR
por el interés de encubrir su torpeza, y no por el amor TEs, CIENCIAs, LEY Es, Gobien No, etc. En cuanto á los
de la verdad. Pero por mas que hagan, basta consi prodigios que produciria el ateísmo, consúltese este
siderar solamente el análisis de la fé para conocer que artículo.
la catolicidad de la enseñanza es la única base en que Segun nuestros adversarios, nuestra religion per
un simple fiel puede fundar razonablemente su creen judíca á la poblacion (véase CELIBAro). Si esto fuera
cia, y que el catolicismo es el único sistema en que se cierto, diriamos que indemniza á la sociedad de los
discurre con consecuencia. Una prueba de la solidez individuos de que la priva con las costumbres que les
de este sistema es que se ha sosténido por espacio de da; para procurar el bien general se necesitan hom—
diez y siete siglos contra los redoblados ataques de sus bres y no animales de dos pies. Pero el cargo es falso
diferentes enemigos. en sí mismo, ninguna religion favorece tanto como el
llay una reflecsion capaz de convencer á cualquier cristianismo el nacimiento de los hombres, ni vela tan
espíritu recto, y es la consideracion de los efectos ci de cerca por su conservacion; ninguna region del
viles y políticos producidos por el cristianismo en to universo, sin esceptuar la misma China, hay tan po
das las naciones que le han abrazado. Montesquieu blada como las habitadas por las naciones cristianas,
los reconoció: dice que debemos al cristianismo, no y en ninguna parte es tan perfecta la civilizacion.
solo la decencia y dulzura de las costumbres, sino un Dicen que el cristianismo, condenando el lujo, per
derecho político en los gobiernos y un derecho de gen judica á la industria y al comercio; mas está demos
tes en la guerra, que nunca podrán los hombresagra trado que el lujo alimentado por el comercio y el co
decer bastante. Sostiene que bien grabados en el co mercio escitado por el lujo, se dañan y destruyen mú
razon los principios del cristianismo serian infinita tuamente; que el esceso en este particular acarrea la
mente mas poderosos para hacernos cumplir con nues ruina de los Eslados y de las sociedades; este es un he
tros deberes de ciudadano, que el falso honor de las cho confesado por todos los filósofos y confirmado por
monarquias, las virtudes humanas de las repúblicas la esperiencia de seis mil años.
y el temor servil de los Estados despóticos. Cosa ad Cargo mas grave es el de intolerancia, hecho al cris
mirable, dice, la religion cristiana, que parece no tianismo; divide á los hombres, produce las dis
tener otro objeto que la vida futura, hace tambien putas, los odios y las guerras de religion. Cien veces
nuestra felicidad en la presente. Espíritu de las leyes, se ha respondido que la intolerancia está unida no
l. 2, c. 3 y 6. solo á toda religion, cualquiera que sea, sino á toda
Pero estaba reservado á los profundos políticos de opinion que se cree importante, y hasta á los sistemas
nuestro siglo demostrar la falsedad de este elogio, y de incredulidad: esto es efecto de las pasiones inse
probar al universo que el cristianismo ha producido arables de la humanidad. Ahora bien, ninguna re
mas males que bienes. Han llevado su locura hasta ¿ trabaja tanto como la nuestra para reprimir
escribir que esta religion enervó los espíritus; que todas las pasiones, para inspirar á las hombres la
pervirtió las costumbres en vez de reformarlas; que dulzura, la paz y la mútua caridad, y de consiguien
tiraniza el pensamiento é inspira , un celo fanático y te una razonable tolerancia. Por lo demas la ilimilada
cruel; que es la mas sanguinaria de todas las religio— tolerancia que quieren los incrédulos es un desorden
nes; ella sola ha causado mas asesinatos que todas las que nunca se ha permitido en ninguna nacion civili
religiones juntas; solo ha producido mártires insen zada V. ToLERANCIA. -

satos, atrabiliarios anacorelas, frenélicos penitentes, El cristianismo, dicen, hablándonos mucho de la

reyes déspotas y perseguidores venerados como san
tos. Lejos de disminuir las desgracias de los pueblos,
no hizo mas que agravar su yugo; y hoy se echa de
menos el paganismo. Estas fueron las declamaciones
de los deistas. Los ateos, que vinieron en pos de ellos,
fueron mas lejos; dedujeron de todas estas sublimes
reflecsiones que solo la nocion de Dios ha causado to
dos estos males, y el único medio de repararlos seria
sofocar para siempre esta nocion fatal y establecer el
ateismo en todo el universo.
Antes de entrar en pormenores preguntaremos á
estos severos razonadores, si ecsiste en la tierra nna
nacion que tenga costumbres mas puras, mas luces,
una legislacion mas sábia, un gobierno mas modera
do, una sociedad mas tranquila y mas decente, una
felicidad pública mas palpable que en las naciones
cristianas? Presentadnos una que habiendo gozado de
las ventajas del cristianismo las haya conservado a—
brazando otra religion; entonces convendremos en que
la nuestra no ha producido ningun bien, y en que si
alguno ecsiste en el mundo tiene otra causa y nada
prueba. Leed el Espiritu de los usos y costumbres de los
diferentes pueblos, y comparadlos con los nuestros:
vereis si perderian algo haciéndose cristianos. A esto
felicidad de la otra vida, nos hace olvidar el cuida—
do del trabajo y los deberes de la presente. Si el
hombre fuese de la misma naturaleza que los brutos
y estuviese como ellos limitado á la vida presente, se
podrian con razon criticar las esperanzas que da el
cristianismo y los deseos que nos inspira; ¿ pero ha
probado la filosofia que seamos brutos? Ilé aqui la
ran falta en que han incurrido la mayor parte de los
egisladores; no han considerado que nada han he—
cho en esta vida para obligará los hombres á procu
rarse la felicidad futura. Jesucristo, único sabio, nos
prescribe la virtud como el único medio de ser felices
en este mundo y en el otro; y la principal virtud que
nos ordena es el amor del prójimo, y de consiguiente
el deseo de contribuir á la felicidad de los demas.
Tenemos tambien en nuestro favor el testimonio de
la esperiencia. Los epicúreos, los filósofos egoistas, los
incrédulos que nada desean ni esperan despues de esta
vida, son mas laboriosos, se ocupan mas en el bien
de sus semejantes, y son mejores ciudadanos que un
cristiano penetrado de la fé y de la esperanza de una
vida futura? En vano buscamos en los siglos pasados
en el nuestro los servicios que los incrédulos han
necho á la humanidad. Es absurdo sostener que una
 CRI 58) C.H.
religion que nos une á nuestros deberes con un in un lado se acusa al cristianismo de dividir á los hom
teres mas poderoso que el de la vida presente, nos bres por disputas de religion, por otro se le acrimina
separa de ellos. ¿En qué sentido el deseo de ser feli— el no inspirarles suficientemente el espíritu nacional,
ces en el cielo puede perjudicar al estímulo de ser esclusivo, aislado, el patriotismo, furioso enemigo de
útiles en la tierra? El mayor elogio que hace la Es todos los demás pueblos como fue el de los romanos.
critura de los santos del antiguo Testamento es el de Igualmente si se entiende por el reino de Jesucristo
haber procurado la gloria y la felicidad de su nacion. un reino temporal, civil y político, es claro que Je—
Eccli., c. 6 y sig. Se ha repetido con frecuencia que sucristo nunca ha pretendido esto; si se trata de un
el cristianismo establece dos potestades, dos legisla reino espiritual, por el que los entendimientos, las
ciones que se cruzan y se unen recíprocamente, una voluntades, las costumbres estén sometidas á las le
autoridad eclesiástica ocupada siempre en usurpar yes, ciertamente que es rey en este sentido hace mas
los derechos de los magistrados y del gobierno; con de diez y ocho siglos; él mismo lo declaró, y á des
tinuamente se habla de las usurpaciones del clero pecho de los incrédulos lo será hasta la consumacion
del abuso que ha hecho de su jurisdiccion. Sin em de los siglos.
bargo, Jesucristo habia establecido la regla luminosa No concluiriamos nunca si fuese necesario refutar en
y fijado los límites que debian, separar estas dos po un solo articulo todas las objeciones de nuestros ad
estades diciendo: «Dad al César lo que es del César, versarios, con las que han llenado volúmenes enteros,
y á Dios lo que es de Dios». En tanto que se conten Sin embargo, no conocemos ninguno que por un pa
gan en estos límites,, es imposible que la una dañe rarelo hecho entre el cristianismo y otra religion haya
á la otra; al contrario se robuslecerán mútuamente. emprendido demostrar cuál era la mejor; todos han
¿Pero en qué tiempo se empezaron á mezclar? Cuan— conocido que la comparacion , los confundiria. Pero
do los príncipes, satisfechos de dominar con la vio han tratado de paliar lo absurdo de las demas y disi
lencia, no conocian derecho natural ni leyes civiles, mular sus defectos y consecuencias para disminuir asi
oprimian á los pueblos y los gobernaban como una el triunfo del cristianismo; en nuestros dias es cuan
manada de brutos; sin el apoyo de las leyes ecle do el politeismo, la idolatria, y el mahometismo hau
siásticas hubieran sido mucho mayores las calamida hallado apologistas. Se ha pretendido que estas reli
des públicas. Al salir de este caos, se dijo que los giones falsas podian establecerse con las mismas prue
sacerdotes todo lo habian dado á Dios y nada habian bas que la nuestra; afortunadamente este hecho es—
dejado al César; hoy se defiende que todo es del Cé tá el por demostrar, y no tememos que se con
sar, y nada queda á Dios: ¿Cuál de estos dos escesos Sl 2 d. -

es mayor? Esto lo dirán los resultados. Pero si Dios no ºran imposible es á nuestros adversarios romper la
hubiera consagrado lo que dió al César, ¿qué hubie cadena de los errores á la que estan atados, como la
ra quedado á éste para gobernar? La violencia como de las verdades que nosotros les oponemos; entre el
á los bárbaros, el palo como en la China y el sable cristianismo eatólico y la incredulidad absoluta no
como en Turquia y los demas estados mahometanos. hay medio; su mismo ejemplo nos sirve de demostra
Facil es conocer si los pueblos serian mas felices de C0l.
esta IllaneTa. Se nos objetará quiza que las pruebas que acaba
Asi, por una contradiccion muy comun en nuestros mos de alegar no están al alcance de los ignorantes.
adversarios, han dicho que el cristianismo tendia á di Si se quiere decir que no están igualmente á su al
vinizar la autoridad de los príncipes, y de consiguiente cance y que tampoco se hallan en el estado de darles
á esclavizará los pueblos; que los sacerdotes y los re el valor que los sabios, convendremos sin dificultad.
yes se habian unido para destruir toda libertad civil: Mas sostenemos que estan bastante al alcance aun de
que los sacerdotes concedian á los soberanos el despo los mas sencillos, para que puedan tener una entera
tismo político, para alcanzar á su vez el despotimo certidumbre por poco instruidos que sean.
espiritual.. En nuestros dias se ha repelido hasta En efecto, un hombre educado en el seno del cris
la sociedad esta ridícula calumnia. Si fuese cierta, las tianismo, no puede ignorar que la venida de Jesucris
naciones cristianas serian las mas esclavas del mundo; to y el establecimiento de su lglesia se predijeron por
afortunadamente los hechos bastan á demostrar que los profetas, que estas predicciones están en los li
este cargo carece de sentido comnn. bros de los judios, que estos ciertamente no los han
Por último algunos soñadores escribieron que, forjado para favorecer nuestra religion: todos los años
cuando se ha querido hacer del cristianismo una re durante el tiempo de adviento, estas predicciones son
ligion nacional, se ha comprendido mal el espíritu de el principal asunto del oficio divino y de las instruc
Jesucristo, cuyo reino no es de este mundo. Si por ciones de los pastores; es de la mayor notoriedad que
religion nacional entendemos una religion que no sea los judíos esperan todavia en la actualidad un Mesias,
tan particular á un pueblo, que no pueda convenir á 62n de estas antiguas predicciones.
ningun otro, nunca fué la intencion de Jesucristo es No puede dudarse que Jesucristo y los apóstoles hi
tablecer una semejante, puesto que mandó á sus dis cieron milagros; sino los hubieran hecho les hubiese
cípulos enseñará todas las naciones, y que se pro sido imposible establecer el cristianismo. Estos nila
puso reunirlas todas en una sola Iglesia como ovejas gros son el asnnto de la mayor parte de los evangelios
en un mismo redil y bajo un mismo pastor. Pero se que se leen en la misa, de las frecueutes instruc
ria muy ventajoso al género humano que las nacio ciones de los predicadores, de los cuadros espuestos
á la vista de todos; y si un incrédulo quisiese dispu
nes demasiado divididas ya, por otra parte, lo fuesen
tambien por la religion, que ni tuviesen el mismo tar este hecho, se le demostraria que los judios, los
Dios, ni el mismo culto, ni la misma creencia? Por paganos y los mahometanos han convenido con él.
 CRI 540 GRI
Los obstáculos que se oponian á la propagacion de divina religion habia llegado á ser un caos de erro
nuestra religion, las persecuciones que ha sufrido, res, de supersticiones, de abusos y de desórdenes, y
los medios por que ha vencido son conocidos de los que habia causado todos los males de que en el dia nos
ignorantes por la multitud de mártires que honra la quejamos; pero que, por último, en el siglo XVI, Dios
¿ cuyos sepulcros y cenizas estan todavia á ha suscitado á los reformadores para restablecerla
nuestra vista. El hombre mas rústico sabe que hu á su primer estado de pureza y santidad; segun esle
bo un tiempo en que, á escepcion de los judios, todos plan sublime han construido todas sus historias ecle—
los, pueblos eran paganos, y conoce que nuestros siásticas, las que no tienen mas objeto que convencer
padres no pudieron abandonar una religion tan li de esto á los léctores.
cenciosa como el paganismo para abrazar una mas Conócese bien que los incrédulos no se cuidaban
santa, sin que Dios haya intervenido en esta revolu de pararse en tan hermoso camino, y que les era fa
cion. Sin haber leido la historia, está bien conven cil sacar partido de este cuadro, Dijeron á los protes
cido de que los bárbaros del Norte no eran cristía tantes: Por confesion vuestra el cristianismo no podia
nos cuando vinieron á desolar nuestras comarcas, y dejar de corromperse, de llegará ser pernicioso y fu
que su conversion no ha debido ser muy fácil de eje nesto al género humano; luego no es Dios su autor.
Cutar. -

Si él mismo, lo hubiera establecido habria apoyado

Aunque no tuviese el testimonio de su conciencia su obra, hubiera tomado medios mas seguros para
para atestiguarle la santidad, la pureza de la moral conservarla en su pureza. No merecia trastornar el
cristiana, la conoceria por la diferencia que hay en universo una religion que, poco despues de un siglo
tre los que la practican y los que no la observan, de su nacimiento, debia empezará depravarse, á ser
y por las sublimes acciones de los santos, cuyas ac perniciosa, que de dia en dia no ha cesado de ha
ciones oye referir. La misma multitud de los escán cerse mas mála. ¿Se necesitaba esperar quince siglos
dalos que suceden, de los errores, que se esparcen, ara detener este torrente de corrupcion y este di
de los esfuerzos que hacen en el dia los incrédulos pa uvio de males, que han anonadado el género hu
ra sofocar hasta los primeros principios de religion mano?
sirve para convencer todo entendimiento capaz de ¿Os atrevereis á sostener que vuestra pretendida
reflexion que, si Dios no la sostuviese con una pro reforma ha reparado alguno? Enseñadnos las guerras
videncia sobrenatural, seria imposible que subsistiera que ha prevenido, los cismas que ha sofocado, las
mucho tiempo. disputas que ha paralizado, los soberanos que ha he
En general, los sábios no estan en estado de cono. chó mas sabios y pacíficos, los vicios que ha corre
cer lo que sabe ó ignora un simple fiel, lo que piensa gido, los pueblos cuya felicidad ha hecho. Vuestros
ó no pensa, hasta qué punto se halla en estado de mismos autores deploran los desórdenes que reinan
discurrir sobre la religion. En todas las partes en que entre vosotros, no teneis costumbres mas puras que
las costumbres son inocentes y puras, el pueblo ama las de los católicos, contra los que habeis declamado
su religion, oye hablar de ella con placer, conversa tanto; no teneis menos intolerancia, y quiera Dios
de buena gana con sus pastores, los oye con atencion y que no renoveis las sangrientas escenas que habeis
les pregunta cuando puede ; muchas veces nos admi presentado en mas de un siglo para estableceros.
ramos de la sabiduria de sus preguntas y de la Vuestra imaginaria reforma no ha servido mas que
facilidad con que comprende las respuestas. Aun para demostrar que el cristianismo es esencialmente
cuando un ignorante no sea capaz de darse cuenta irreformable, elc.
de lo que piensa, no se sigue de esto que no pien No sabemos lo que los protestantes responden á
sa, ó que su creencia no es razonable, porque no este argumento de los incrédulos: pero nos parece
sabe deducir sus razones; conoce perfectamente la que no harán nunca sólidamente la apologia del cris—
falsedad de una objecion, aunque no se halle en es tianismo en general, sin hacer al mismo tiempo la
tado de responder á ella y refutarla. Los que están del catolicismo y la de la Iglesia romana.
encargados de dirijir las alimas sencillas y puras ad
miraná cada instante el modo como Dios las ilumina, * CRISTIANISMO RACIONAL. Especie de deismo,
las relexiones que la gracia les sugiere, la fé pru— cuyos fautores principales en Inglalerra fueron Kip—
dente y sólida que les inspira. V. IGNoRANCIA, Fé, pis, Pringle, Hopkins, Enfield y Toulmin. Se en -
sayó dar una apariencia de culto á esta nueva religion
No podemos dispensarnos de observar que los pro ó mas bien á esta carencia de toda religion. David
testantes han abierto el camino á la mayor parte de Williams, que se tituló sacerdote de la naturaleza,
los argumentos de los incrédulos. Han dicho que el abrió en Londres, su capilla, en la que se desenca
cristianismo en su orígen, tal como habia salido de denó contra todas las instituciones religiosas que te—
mano de Jesucristo y de los apóstoles, verdadera nen la revelacion por fundamento. Pero este culto
mente era una religion divina, santa, irreprensible, público desapareció al cabo de cuatro años de ecsis—
la mas perfecta y la mas útil al género humano; pero iencia, porque bastante número de sus sectarios,
que bien pronto los pastores ¿ la mezcla de las opi llegando gradualmente del deismo al ateismo, aban— *

niones filosóficas, por la ambicion de atribuirse una donaron una institucion que para ellos habia que
autoridad superior á la de los apóstoles, por la in dado sin objeto. -- - - «

fluencia de todas las pasiones humanas habia lle

gado insensiblemente á alterar los dogmas, á corrom cristiano. Hablando de personas, significa un
per el culto, á debilitar la moral y cambiar la hombre bautizado, y que hace profesion de seguir la
disciplina; que en la sucesion de los siglos aquella doctrina de, Jesucristo: hablando de cosas,73lo que se
e -- º.
TOM10 I, - A
 (RI 550 CRI
halle conforme con esta doctrina; asi se dice un dis— mero de sacerdotes y de fariseos se contaban en el
curso cristiano, una vida cristiana, etc. número de los fieles. (Act., c. 4, y . 3 y 39; c. 7, y.
En la ciudad de Antioquia hácia el año 1 fue 7; c. 15, y.5). Estos son otros tantos testigos ocula
cuando los discípulos de Jesucristo fueron llamados res de lo que habia pasado en Jerusalen. ¿Se dirá que
cristianos. Se les llamaba tambien elegidos, herma eran la parte mas vil del pueblo?
nos, santos, creyentes, fieles, nazarenos ó purifica Jornelio el centurion, el eunuco de la reina de Can
dos, jeseos Yutzes palabra formada de las letras ini. daces, Sergio Pablo, proconsul de Chipre, los princi—
ciales de los títulos de Jesucristo YEsoUs, JRIsos, pales judios de Berea, Dionisio de Atenas, Crispo; ge
TzEou, Uvos, SoTER, Jesucristo hijo de Dios Sal fe de la sinagoga de Corinto, Apolo, Cefas, Timoteo
rador; gnósticos inteligentes ó iluminados, teoforos y y Tito, discípulos de S. Pablo; no eran ni hombres
cristóforos, templos de Dios y de Jesucristo, aun al— de la hez del pueblo ni ignorantes; los principales del
unas veces cristos, consagrados á Dios por una un Asia eran sus amigos. c. 19, y. 19,26, 31). Her
ion santa. No es seguro que Filon los haya desig mas, S. Clemente, S. Ignacio, S. Policarpo, aquellos
nado con el nombre de terapeutas. Véase esta pa á quienes escribieron los apóstoles eran cierta nente
labra. hombres de letras. S. Pablo en Roma tuvo prosélitos
Los paganos por odio los llenaron de nombres in no solo entre los principales judios, sino en el palacio
juriosos; los llamaron impostores, mágicos, judios, de los emperadores. Segun los autores profanos, Fla
galileos, sofistas, ateos, parabolarios ó parabolinos, vio Clemente, pariente de Domiciano, Domitilla, her
es decir, desesperados por el valor con que los cris mana de este emperador, el cónsul Acilio Glabrio,
tianos despreciaban la muerte; biothanati, gentes que Pomponia Graecina y otras personas de primera ca—
viven para morir, sarmentitii, hombres que huelen tegoria habian renunciado al paganismo. La mayor
á chamusquina, semiassi, dispuestos al súplicio. Lo parte de las lecciones que dá S. Pablo á los fieles en
mismo hicieron los herejes llamando á los católicos sus cartas no pueden ser aplicables sino á hombres
simples, alegoristas, antropolatras ó adoradores de un de una condicion elevada, é instruidos en las ciencias
hombre, etc. humanas.
En el dia los incrédulos quieren aprovecharse de En el siglo II, Quadrato, Meliton, Hegesipo, Atená
esta prevencion de los paganos, y pretenden con goras, S. Justino, Taciano, Hermias, Teófilo de An
firmarla con calumnias. Dicen que los primeros que tioquía, Apolinar de Ilieraples, Dionisio de Corinto,
creyeron en Jesucristo eran la hez del pueblo, lo que Policralo de Eleso, Panteno, S. Ireneo, S. Clemente de
habia mas vil entre los judios, y entre los paganos; Alejandria, etc., honraron el cristianismo tanto por
por consecuencia, ignorantes, fanáticos; que á la ma sus obras como por sus virtudes. Los PP. de la ¿
yor parte se les dió muerte por sus crímenes y su ca sia del II y IV siglo han sido los mas sábios escritores
rácter sedicioso, y no por su religion; que cuando de su tiempo.
llegaron á ser señores, usaron de represalias con los 2." En el artículo MARTIREs probaremos que á
paganos y les han devuelto con usura las crueldades los cristianos se les dió la muerte únicamente por su
que habian ensayado con ellos. Es importante refutar religion, y no por ningun otro crímen, ni por ningun
estas tres acusaciones. otro acto sedicioso; pero con anticipacion podemos
Antes de probar lo contrario, observaremos desde limitarnos á solo el testimonio de aquellos mismos que
luego que el prodigio del establecimiento del cristia han afectado despreciarlos. Tácito no les echa en cara
nismo no seria menor, aunque no se hubiese abra— otro delito que su supersticion, y el ser aborrecidos
zado entonces mas que por el pueblo; los ignoran del género humano. (Annal., l. 15, núm. 6). Plinio,
tes y los pobres son mas inclinados á la supersti despues de las pesquisas mas severas, confiesa que
cion que los hombres instruidos y de una condicion no ha descubierto en ellos mas que una supersticion
honesta, por consecuencia, los primeros debieron es— grosera y pertinaz (lib. 10, Epist. 97). El emperador
tar mas apegados al paganismo que los segundos, Antonino, en su rescripto á los Estados del Asia, hace
mas difíciles de convertir. justicia á la inocencia de sus costumbres (S. Justino,
Por otro lado nuestros adversarios tienen el cuida Apol., 1, núm. 69 y 70) Juliano, encarnizado en ca
do de refutarse á sí mismos. Dicen que uno de los lumniarlos, se vé precisado á hacer el elogio de su ca
atractivos que ha contribuido mas á la propagacion ridad, y de atribuirles al menos la apariencia de to—
del Evangelio, son las abundantes limosnas de los das las virtudes (Carta 9 á Arsacio), Celso, despues
rimeros cristianos; y si todos hubieran sido de la de haberles echado en cara su incredúlidad, su aver
ez del pueblo, habrian tenido con qué dar limos sion hácia el paganismo, su furor para presentarse
nas? - -

á la muerte, su celo en hacer prosélitos, conviene en

Vengamos á las pruebas positivas de la falsedad de que ¿ entre ellos hombres graves, inteligentes é
SllS aCUSaCl.0162.S. instruidos. (Oríg. contra Celso, l. 1, núm. 27). Seme—
1." En la Judea, S. Juan Bautista, Nicodemus, jantes confesiones hechas por enemigos declarados nos
José de Arimatea, Lázaro, Zaqueo, el príncipe de Ca parecen bastante buena apología contra las calumnias
farnaum, cuyo hijo curó Jesucristo, Jaira, cuya hija de los incrédulos.
resucitó, creyeron en él con toda la familia. Estos no 3.º Para poder acusar á los cristianos de vengan
eran hombres de la hez del pueblo ni ignorantes. Des za y de crueldad hácia los paganos han recurrido
¿ de la resurreccion de Lázaro muchos de los ju los incrédulos á espedientes singulares. Les atribu—
ios principales hicieron lo mismo. (Joan,, c. 11, en las crueldades de Licinio, su perseguidor. Se sa
y. 5; c.15, y, 2). Despues de la venida del Espíritu e que este mónstruo fue el que hizo echar en el
Santo S. Pablo y Gamaliel su maestro, un gran nú— Oronte á la muger de Maximino su enemigo, hizo ase
 CRI 551 CRl
sinar sus hijos, hizo degollar en el Egipto y en la Pa bicion de sus pastores. Sin embargo, no se ha habla
lestina á los magistrados que habian seguido el par— do de esta pretendida amíbicion ni en las razones
tido de Maximino; este es el que hizo morir al César que da Tácito de la persecucion de Neron, ni en la
Valerio ó Valente, que él mismo habia criado y al carta de Plinio, ni en la respuesta de Trajano, ni
joven Candidiano, hijo adoptivo de Maximiano Gale— en los edictos de los emperadores, ni en los interro—
rio, etc.; y se atreven á culpar á los cristianos de estos gatorios de los mártires, ni en las quejas de nuestros
crímenes, y á asegurar que ellos son los autores. apologistas. Tertuliano desafiaba á los magistrados
Por un rasgo de la misma equidad se ha repetido á citar un solo rasgo de independencia, de rebelion,
mil veces que Constantino hizo triunfar el cristianis— de desobedencia de parte de los cristianos; no vio
mos por edictos sangrientos, por violencias y cruelda laban mas que una sola ley, la que mandaba adorar
des inauditas, ejercidas contra los paganos. Es no obs— á los dioses del imperio.
tante incontestable que los primeros edictos de Cons— La mayor parte de nuestros adversarios piensan
tanlino solo concedían la tolerancia á los cristianos; ue la moral del Evangelio, lejos de favorecer la in
que los siguientes establecieron penas contra los de— ependencia, al contrario, es muy favorable á los
litos de los paganos, y no contra su religion; que la ríncipes y á los gefes de las naciones; que manda
mayor parte de estos edictos no se ejecutaron. No se a obediencia pasiva, y tiende á hacer á los pueblos
uede citar el ejemplo de un solo pagano á quien se esclavos. Segun ellos, fue uno de los motivos que
e haya dado la muerte por haber perseverado en el condujeron á Constantino á favorecer el cristianismo;
paganismo. (V. Mem. de las Inscrip. t. 22, en 12.º, juzgó que los principios de esla religion eran los que
p. 350, l. 15, en ...", p. 94). mas convenian á su autoridad despótica; estaba, pues,
En fin, nuestros adversarios han tenido á bien atri bien convencido que los cristianos no querian hacerse
buirá los cristianos las violencias y los furores que los independientes de la autoridad civil, ni atribuirá sus
arrianos ejercieron contra los católicos en los reinados pastores una jurisdicion contraria á la del soberano.
de Constancio, de Juliano, y de Valente, que favore— Mas de una vez escribieron los mismos acusadores,
cieron el arrianismo; como si esta herejia no hubiese que Constantino concedió á los obispos un nder es—
sido un verdadero anticristianismo. Semejantes im cesivo y una parte de la autoridad de los maristra
T1010.
ras nunca honrarán á los que á ellas han recur dos, que él es el que escitó y fomentó la ambicion del
clero. Es, pues, enteramente cierto que antes de esta
Nuestros antiguos apologistas S. Justino, Oríge época los pastores de la Iglesia no habian pensado
nes, Tertuliano y S. Cirilo, han desaliado á los pa— en hacerse independientes ni apoderarse de la auto
ganos á que echen en cara á los cristianos un solo ridad civil.
acto de sedicion ó rebelion, un solo crimen bien ave— Asi es como nuestros adversarios se refutan á sí
riguado; y esto en un tiempo en que el imperio, des mismos, y hacen sin querer la apologia de nuestra
¿? por guerras civiles, devastado por usurpa religion. -- a -

ores y asolado por tiranos no presentaba mas que
un cuadro de crímenes. Una multitud de fanáticos
imbéciles, de ignorantes seducidos por impostores,
hombres sin conciencia y sin costumbres, ¿ha podido
hallarse de repente dotada de todas las virtudes? Ilé
aqui el argumento al que nuestros antiguos enemigos
no han podido responder, y que nunca destruirán
los calumniadores modernos.
Convenimos en que los judios y los paganos se han
puesto muchas veces de acuerdo para acusar á los
cristianos de los mayores delitos. Se dijo que en sus
reuniones degollaban á un niño, lo comian, y se man
chaban con impudicicias abominables; el pueblo es—
taba persuadido de esto. Se les acusaba de mágicos,
rque entre ellos se hacian milagros; se les atri
buian las plagas de la naturaleza y los desastres del
imperio; nuestros antiguos apologistas se vieron obli
gados á responder sériamente á todas estas acusacio—
nes dictadas por el furor del anatismo.
Pero Tácito, Plinio, Antonino , Celso , Luciano,
Juliano, Libanio nada semejante han hallado, ni
nada de esto han creido. Plinio habia hecho poner
- en el lormento muchos cristianos para saber la ver
dad y los juzgó esentos de crimen; aque"los mismos
que habian apostalado protestaron que no habian
visto nada qur no fuese inocente en la religion cris
tiana.
Pretenden que los cristianos escitaron el odio de los
- magistados y del gobierno, ¿º querian hacerse
independientes de la autoridad civil, que tal era la am
Si se quiere saber lo que han sido los cristianos
en los diferentes siglos, es necesario consultar la obra
de Fleury titulada Costumbres de los cristianos; no
aventura nada sino con buenas pruebas, desen
vuelve con mucha sagacidad las causas que han i
fluido en las costumbres de los pueblos de Europº.
desde que fueron cristianos. Sin embargo, es necesa
rio acordarse que los ejemplos citados por Fleury no
son siempre una regla general; en los siglos mas
puros no ha dejado de haber cristianos muy viciosos,
y en los tiempos mas corrompidos siempre se han
visto ejemplos de virtud heróica. Aun en el dia, á
pesar de la perversidad del mayor número, no es
raro encontrar almas verdaderamente cristianas, cu
yas costumbres son dignas de los siglos mas hermo
sos de la Iglesia.
Se juzgaria muy mal del carácter y de la conducta
de los cristianos én general, si en esto nos refiriése
mos al cuadro que ha presentado Mosheim en los di
ferentes siglos de su Historia eclesiástica; parece que
no habla de esto sino para hacer olvidar el cambio
ue ha verificado el cristianismo en las costumbres
e los pueblos que lo han abrazado , efecto que es
una de las pruebas mas palpables de la divinidad de
nuestra religion, y en el que han insistido todos los
apologistas. Aun en el siglo I, 2." parte, c. 3, S.9,
dice que nº se debe juzgar de la vida y de las cos
tumbres del cuerpo de los fieles por los ejemplos
eminentes de santidad que algunos han dado, ó por
ios preceptos sublimes y las exhortaciones de algu
 chi 552) (CRI

nos doctores piadosos, ni imaginarse que se dester paganismo. Pero el primer ecsamen que hay que ha
raban hasta las apariencias del vicio y del desorden cer es saber si los pastores de la Iglesia han cometi
en las primeras sociedades cristianas: que está pro do verdaderamente esta falta; y esto es lo que nunca
hado lo contrario por testimonios, pero no cita nin se probará. -

guno de ellos. - El principal crimen que Mosheim echa en cara á

El mejor testimonio que tenemos de la pureza de los cristianos del siglo II, son los fraudes piadosos, en
este artículo veremos lo que hay en el particular.
las costumbres de los cristianos del siglo I, es sin du
da el de S. Pablo; asi despues de haber reprendido No ha dicho nada de particular de las costumbres
los vicios que reinaban entre los paganos, la idola de la Iglesia del siglo III; ha conocido que las obras
tria, la fornicacion , el adulterio, los pecados contra de Minucio Felix, de S. Clemente de Alejandría, de
la naturaleza, la avaricia, la intemperancia, la ira, Tertuliano, de Orígenes, y los ejemplos de firmeza
la rapacidad, dice: «Algunos de vosotros han sido que dieron S. Cipriano y otros obispos depondrian
culpables de esto, pero habeis sido lavados, purii contra él. Se ha visto precisado á convenir en que el
cados y santificados por el nombre de Jesucristo y vigor de la disciplina penitencial se conservó duran
por el espíritu de Dios» (I Cor. c. 6, y . 9). El rigor te todo este siglo; pero ha ecsajerado sin razon el nú
con que amenaza tratar al incestuoso parece que mero de lapsos ó de aquellos que sucumbieron al ri
rueba que no se toleraba ningun vicio, ni ningun gor de las persecuciones. V. LAPsos,
¿de en las primeras sociedades cristianas. Si se En el cuarto no ha economizado, las palabras; hay
añade á este testimonio lo que dicen S. Clemente y en él, dice, algunas personas distinguidas por su
S. Ignacio en sus cartas con respeclo á las costum piedad, y otras manchadas de crímenes. El número
bres de los fieles, la prueba de su inocencia nos pa de los cristianos viciosos empezó á aumentarse de tal
rece completa. modo que los ejemplos de una verdadera piedad, de
En el siglo II dice que, á medida que los límites una virtud sólida llegaron á ser sumamente raros:
de la Iglesia se estendieron, se aumentó en propor— la mayor parte de los obispos presentaron á su re
cion el número de personas viciosas y desarregladas baño ejemplos contagiosos de órgullo, de lujo, de
que entró en ella; nosotros creemos, y con mucha molicie, de animosidad y de otros muchos vicios. La
mas razon, que se aumentó todavia mas el número penitencia rigorosa que se imponia á los pecadores
de personas virtuosas. ¿Qué motivo hubieran podido escandolosos no tenia lugar con respecto á los gran
tener los hombres viciosos para abrazar el cristianis des: no habia mas que personas oscuras é indigentes
mo en un tiempo en que era perseguido y univer— que esperimentasen la severidad de las leyes.
salmente aborrecido, y que sus adictos estaban con— Es no obstante incontestable que el siglo IV fue
tinuamente espuestos , al suplicio? Tenemos como el mas brillante de todos por la multitud de obispos
arantia de la santidad de las costumbres de los cris que han honrado la Iglesia con sus virtudes, como
ianos de este siglo, no solo á S. Justino, Atenágo con sus talentos; basta nombrar á S. Atanasio, S. Ba
ras, S. Irenéo, S. Teófilo de Antioquia, que han de silio, S. Cirilo de Jerusalen, S. Gregorio Naciance
safiado á los paganos á que acusaran de algun crimen no, S. Gregorio Niseno, S. Hilario de Poitiers, san
á los fieles, sino la carta de Plinio á Trajano, el tes Martin, S. Ambrosio, &c. ¿Son estos grandes hom
timonio de los apóstatas á quienes él habia preguntado, bres los que han dado á sus ovejas ejemplos de orgu
el del emperador Antonino, en su rescripto á los es llo, de lujo, de molicie, de animosidad y demas vi
tados del Asia, y el de Luciano, en su relacion de la cios? Casi todos habian sido educados en la austeridad
muerte de Peregrino. de la vida monástica, y la admiracion de sus virtu
Como con la disciplina penitencial era con la que des ha conducido á los pueblos á tributarles un culto
los pastores de la Iglesia conservaban en ella la pu— religioso despues de su muerte. Pero cuando se em—
reza de las costumbres, Mosheim ha creido de su in— pieza por formarse una idea falsa de la verdadera
terés denigrar su origen. Segun él, esta institucion piedan y de la virtud sólida, no es de admirar que se
muy sencilla en su principio se alteró insensible la desconozca aun en aquellos mismos que han sido
mente por la multitud de ceremonias que se le aña sus mas perfectos modelos. A estos de que hablamos
dieron, y que se tomaron, dice, de la disciplina re no los han podido sufrir los herejes, y han declama
cibida en los misterios del paganismo. Pero las reglas, do y se han enfurecido contra ellos; hé aquí á los ojos
las prácticas, los ejemplos de la penitencia no esta de los protestantes el crímen que borra y destruye
ban espuestos con bastante claridad en los escritos todas las virtudes: S. Ambrosio prohibió la entrada
de los profetas y de los apóstoles, sin que fuese ne en la iglesia al mismo Teodosio, culpable de la ma
cesario buscar el modelo entre los paganos? Se puede tanza de Tesalónica; esto nos parece que prueba que
demostrar con pruebas positivas que se practicaban en la penitencia no estaba solo reservada para las perso—
los misterios del paganismo las mismas cosas que en mas oscuras é indigentes. Lactancio, Eusebio, Arno
la penitencia, ya pública, ya particular de los fie bio deponen de la diferencia que habia todavia en
les del siglo II? Mosheim aplicaba esto sobre todo á tre las costumbres de los cristianos y las de los paga
la confesion y esta es prescrita ya por Santiago, (c. 5, nos; el mismo Juliano, aunque apóstata, se vió pre
y. 16, y por S. Juan, I Joan., c. 1, y . 9). Asi es como cisado á convenir en ello.
por obstinacion de secta, los protestantes calumnian El número de los obispos ilustres del siglo V es,
á la Iglesia primitiva. Resta examinar, dice Mos por lo menos, tan grande como en el IV. Nos con -
heim, si convenia ó no tomar de los enemigos de la tentamos con nombrar á S. Epifanio, S. Juan Cri
verdad las reglas de esta disciplina saludable, y san sóstomo, S, Sulpicio-Severo, S. Agustin, S. Pauli
tilicar en algun modo parte de las supersticiones del no, S. Cirilo de Alejandria, S. Isodoro de Damieta,
 CRI 553 CRI
S.llilario de Arlés, S. Leon y S. Gerónimo, simple Asi el interés sistemático conduce á los protestan
sacerdote. Sin embargo que en esta época, segun tes hasta denigrar á los discípulos de los apóstoles;
Mosheim, los vicios del clero llegaron á su colmo, ca los inc, édulos han dado un paso mas : han atribuido
lumnia que hemos refutado en la palabra CLeRo, el li estos errores á los mismos apóstoles. Limité notios á
bro de S. Agustin, de moribus Ecclesiae catolicae, de disculpará los primeros cristianos; en otra parte justi
pone altamente contra las prevenciones de los incré ficaremos á los apóstoles. 1 º Mosheim no ha visto en
dulos y de los herejes, tre los judios antes del cristianismo ningun vestigio
Convenimos que la irrupcion de los bárbaros, que de las opiniones judáicas de que habla, y desafiamos
sucedió en este siglo, causó una funesta revolucion en á todos los críticos protestantes, á que nos indiquen
las costumbres; pero no se hizo sensible sino en los uno; Mosheim conviene en otro lugar que no se dedu
siguientes siglos. V. BáRBAnos. ce sino por conjetura, 2." El mismo observa, S. 18,
¿Qué prueba la reprension de los vicios que los PP. que los primeros cristianos tuvieron muchas contesta
y los moralistas han hecho en todos los siglos? Que ciones con los judios y con los paganos preocupados
nuestra religion, nos enseña una moral mucho mas con la filosofia en nada estaban dispuestos á seguir
severa que la de los paganos, que nos prescribe vir las opiniones de unos ni de otros, 3." Si entiende que
tudes que ellos no conocian, y nos prohibe vicios de en los siglos I y II algunos particulares han conservado
los que no hacian ningun escrúpulo. La vida honesta las opiniones de los judios ó de los paganos, que no
de un pagano pareceria muy corrompida y escanda eran contrarias á ningun dogma de la fé cristiana, no
losa en un cristiano. V. MoRAL. disputaremos contra él; pero si pretende que estas
Se preguntará sin duda, ¿qué motivo tienen los opiniones eran muy comunes y bastante esparcidas
protestantes para desacreditar las costumbres de la para formar una especie de tradicion, es una falsedad
Íglesia en to dos los siglos? El interés de sistema. Se y una suposicion contraria á las promesas de Jesu
ria necesario responder algo á los católicos que han cristo. Mosheim conviene que entonces el espíritu San
comparado la conducta de los pretendidos reforma to presidia todavia á la Iglesia cristiana para obrar
dores con la de los primeros fundadores del cristianis milagros; ¿y estaria menos para preservarla del er
mo, y las costumbres de los sectarios con las de los ror? .° Si ha habido entre los primeros doctores cris
primeros fieles. Para paliar el oprobio de la dichosa tianos algunas opiniones falsas ó dudosas, defende
reforma, se han visto obligados nuestros contrarios á mos que han nacido de una falsa interpretacion de la
calumniar la Iglesia primitiva, tanto en la doctrina Sagrada Escritura y no de ninguna otra fuente. Asi
como en las costumbres. Véase RrroRMA. Poco les im algunos pudieron creer próximo el fin del mundo por
porta dar armas á los enemigos del cristianismo, con las palabras de Jesucristo, (Mat., c. 24, y.3%, de las
tal que inspiren preocupaciones contra la Iglesiacató de S Pablo, l. Thess.,c. , y, 1, ele). Los incrédu
lica. Los escritores sensatos de la Historia eclesiásti los nos objetan tambien que Jesucristo y los apóstoles
ca se han dedicado á manifestar en ella virtudes, per habian anunciado el fin del mundo con objeto de ate
suadidos de la utilidad de esta leccion; los herejes se morizar á sus oyentes. La venida, el reinado y los
dedican principalmente á hallar en ella vicios, con el crímenes del Ante-cristo parece que estan predichos
fin, sin duda, de autorizar á que los imiten todos los (II Thess., c. 2, y.2; 1 Joan., c. 2, y 18, etc)., mu
hombres y quitará nuestra religion una de las prin chos comentadores lo creen todavia. Lo mismo suce
cipales pruebas de su divinidad. de con el reinado de los mil años. (Apoc., c. 20, y 6
Las acusaciones que han hecho contra la creencia y sig)., y del fuego purificador (1 Cor., c. 3, y 13;
de los primeros cristianos no estan mejor fundadas II Petri, c. 3, y. 7 y 10, etc). No ha habido pues, ne
que las que se han permitido contra las costumbres. cesidad de consultar á los judios sobre todos estos ar—
Mosheim, Inst. hist, christ., c. 3, S.7, sostiene que lículos. V. ANTECRIsro, FIN DEL MUNDo, MiLENARios.
en el tiempo mismo de los apóstoles ó inmediatamente En cuanto á las pretendidas opiniones paganas, no
despues de los fieles estaban imbuidos en muchos er— es mas dificil señalar su orígen en nuestros libros san
rores ; unos que les venian de los judios, otros de los tos; la distincion entre los espíritus buenos y malos,
gentiles; de lo que deduce que no es neceserio pensar entre los demonios y los ángeles está en ellos clara
que una opinion pertenece á la doctrina cristiana por mente establecida: hemos visto lo que se dice en ellos
que haya reinado en la Iglesia desde el primer siglo; de las apariciones de los ángeles á los patriarcas, del
que asi el argumento sacado de la tradicion es abso— cuidado que tienen de los hombres y de las naciones,
lutamente nulo. Coloca en la clase de los errores ju de las instrucciones que dieron á los profetas, etc.
dáicos la opinion del próximo fin del mundo, de la ve Tambien se lee lo perteneciente al demonio en el libro
nida del Ante-cristo , de las guerras de los críme de Job y en el de Tobias, en el Evangelio y en las
nes de que debia ser autor, del reinado de Jesucristo epístolas de los apóstoles; ¿no era esto bastante para
en la tierra durante mil años, del fuego que purifi— razonar sobre la naturaleza de los espíritus buenos y
caria las almas en el fin del mundo. Atribuye á las malos? Se ha hablado de los fantasmas ó de los espec
lecciones de los paganos lo que se pensaba en cuanto tros. (Mat., c. 1, y . 26; Luc., c. 2, y. 37.) La pa—
á los espíritus ó genios buenos ó malos, de los espec rábola del rico avariento, la bajada de Jesucristo á
lros y de las fantasmas, del estado de los muertos, de los ini rnos, las promesas de la resurreccion general
la eficacia del ayuno para vencer los malos espíritus, han dado lugar á conjeturas sobreelestado de los di
del numero de cielos, etc. No hay nada de esto, di funtos, etc. La utilidad de la abstinencia, del ayuno,
ce, en los escritos de los apóstoles, lo cual prueba la de las mortificaciones no está fundada en las ideas de
necesidad que tenemos de sujetarnos á la Sagrada Es los paganos, sino en las lecciones y en los ejemplos
critura, como la única regla de creencia. de Jesucristo, de S. Juan Bautista, de los apóstoles y
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de los profetas. Véase AbstINENCIA. Los antiguos doc reyes..... y no me habeis conocido». Se han admira
tores cristianos que han hablado de estos diversos do algunos incrédulos de ver que se le ha dado el
puntos de doctrina, han citado la Sagrada Escritura, nombre de Cristo á un rey infiel; no comprendian el
y no las tradiciones de los judios, ó las opiniones de sentido ordinario de esta palabra.
de los filósofos paganos. Tambien se hace mencion del En un sentido mas sublime el nombre de Cristo ó
tercer cielo (Il Cor., c. 12, y . 2 y 1); los incrédulos de Mesias se ha dado al Hijo de Dios encarnado, por—
no se han olvidado de echárselo en cara á S. Pablo. que reunió en su persona la dignidad de rey, de sa
Tenemos, pues, aqui tres motivos de cusacion con cerdote y de profela. Los escritores romanos que igno
tra nuestros adversarios: el 1.º que se han atrevido á raban su significacion v que lo tomaban por un nom—
tachar de error sentimientos evidentemente fundados bre propio, han escrito algunas veces Chrestus por
en la Sagrada Escritura: el 2.º que atribuyen á los Christus.
judios y á los paganos algunas opiniones dudosas, que Cristo, dice Lactancio, no es un nombre propio,
provienen mas bien de una interpretacion defectuosa sino un título que designa el poder y la dignidad
de los libros santos, que de cualquiera otra cansa: real; asi llamaban los judios á sus reves. Les estaba
el 3." que sacan de esto una consecuencia enteramen mandado hacer y consagrar un perfume para ungir
le opuesta á la que se dedice naturalmente. Si hm aquellos que eran elevados al sacerdocio ó á la dig—
biese sucedido á los primeros cristianos entender mal nidad real. Lo mismo que entre los romanos un ves
el testo sagrado, ¿cómo podrían desengañarse estan tido de púrpura era el ornamento y la señal de la so
do atenidos á él como la única regla de fé? El medio berania , asi entre los judios una uncion santa era el
único que tenian para salir del error era evidentemen. símbolo de la dignidad real. Por esto es por lo quella
te el consultar la creencia comun de las Iglesias apos mamos Cristo al que ellos llamaban Mesias, es decir,
tólicas; esto es lo que se ha hecho para distinguir la ungido ó rey consagrado, porque este augusto per—
verdadera doctrina de Jesucristo de las opiniones du sonaje posee no un reino temporal, sino un reino ce
dosas ó falsas. Pero no es este el único caso en que lestial y eterno». (Divin. Inst., l. , c. 7).
uestros adversarios, queriendo desacreditar la tra
dicion, nos han demostrado su necesidad. Cristolitas. Herejes del siglo VI, su nombre
CRISTANOS DE S. JUAN. V. MANDATAs. se deriva de knysos y de Luo yo separo; porque sepa—
raban la divinidad de Jesucristo de su humanidad.
CRISTIANOS DE STO. TOMAS. V. NEs romIA—
Nos, S. . Sostenian que era IIijo de Dios, que al resucitar ha—
CRISTIANOS. Secta de la familia baptista, que tu bia dejado en los infiernos su cuerpo y su alma, que
yo origen hácia 180 en el Portsmouth , en el New— no habia subido al cielo sino con su divinidad; solo
Hampshiro en los Estados-Unidos, en consecuencia S. Juan Damasceno es el autorantiguo que ha habla
do de ellos.
de las predicaciones del ministro baptista, Elias
Smith. Los que la componen abjuran toda apelacion v: rática. Arte de descubrir y de probar la auten
de los nombres de secta ú hombre, no quieren tomar ticidad ó la falsedad, la integridad ó la alteracion, el
ningun otrolítulo mas que el de cristianos propiamen— sentir verdadero ó falso de los monumentos y libros
te dichos y afectan escribirlo asi: christians. No exi antiguos, y de fijar el grado de autoridad que se les
en masprueba de fé que una declaracion de ahesion debe conceder. Critica se deriva del griego kRyNo,
á la religion cristiana. Desechan la mayor parte de yo juzgo. Este arte es indudablemente necesario; an
los dogmas, principalmente el de la Trinidad, y se les les de dar fé á un título cualquisra, es necesario sa
podria colocar entre las sectas casi enteramente racio ber de dónde viene, si es efectivamente de aquel á
nalistas. No bautizan mas que á los adultos, son in quien se atribuye ; si está entero, si no ha sido mu
dependientes salvo la jurisdicion oficiosa de una reu tilado ni interpolado, cuál puede ser el sentido de las
Inion central. palabras de que el autor se sirvió, si es original ó solo
una traduccion. Es necesario tomar estas precaucio
Cristo. Este nombre, derivado del griego kRyev N nes con los libros sagrados, con las obras de los PP. y
ungir, hacer una uncion, significa en su origen una con los monumentos de la historia eclesiástica; por no
persona consagrada por una uncion santa; es el sinó— haberla observado en los siglos anteriores, muchas
nimo del hebreo Mesias. veces se citaron con confianza libros cuya falsedad
Los orientales han hecho siempre gran uso de los se ha descubierto despues, ó autores que ninguna fé
perfumes, les eran necesarios cuando desconocian el merecian.
uso del lienzo; este era el único medio de evitar los El arte de la critica ha hecho grandes progre
malos olores. Al salir del baño no dejaban de frotar— sos en el siglo anterior y en el actual, y ha pres
Se con aceite o esencia perfumada ; derramarla sobre tado á la religion servicios importantes; se han ec
la cabeza, la barba y los vestidos de alguno era ha— saminado, comparado y discutido los antiguos mo
cerle honor y tratarle como una persona de distincion. numentos con toda la sagacidad y esactitud posibles.
Por esto la efusion de los aceites odoríferos llegó á ser La duda está en saber si por evitar un esceso no se ha
un símbolo de consagracion; asi fueron consagrados caido en otro, y si queriendo hacer un bien se ha he
los reyes, los sacerdotes y los profetas. En el estilo de cho un mal grandísimo.
los escritores del antiguoTeslamento, ungir unaperso Algunos escritores, despues de haber eesaminado
na para alguna cosa, era destinarla óconsagrarla.á ella. las reglas de la crítica establecidas por algunos sa—
- Leemos en el profeta Isaias (c. 5, y. 1): «El Se— bios que se han adquirido la mayor reputacion , en
ñor ha dicho á Ciro: mi Cristo ó mi rey, os he to este género de trabajos, han creido encontrarlas de
mado de la mano para someteros las naciones y los fectuosas y han procurado demostrar que los que han
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tenido mas confianza en ellas, no las han seguido jores críticos, puesto que sus decisiones no son infa
constantemente en la práctica. libles, sino que se deben ecsaminar y pesar sus ra
Esto es lo qne ha hecho el P. Honorato de Santa zones. Uno de los mayores cargos que contínuamente
Maria, Carmelita descalzo, en una obra titulada Re— hacen los protestantes á los PP. de la Iglesia es de—
fleaciones sobre las reglas y el uso de la crítica, en tres cir que no han tenido crítica estos autores respeta
vol. en ..." Despues de observar la marcha de nues— bles: les responderemos en la palabra PADREs DE LA
tros mas estimados críticos, los acusa : logLESIA.
1." . De elogiar un autor, de alabar su mérito y CRITICA SAGRADA. Conocimiento de las reglas
sus talentos cuando tienen necesidad de su testimo por las que se debe juzgar de la autenticidad, inte—
nio, y de deprimirle y hacer poco caso de él, cuan— gridad y autoridad de los libros santos, y del sentido
do no están acordes con sus opiniones. 2." De prefe en que se deben entender. No podemos dar idea mas
rir ordinariamente el dictámen de un hereje, que esacta de esta ciencia, que copiando el plan que de "
no tiene mas mérito que una gran temeridad, al de un tratado completo de ella trazó Mr. Mallel , y que
los escritores católicos mas respetables. 3." De adini hizo insertar en la Enciclopedia en la palabra Biblia.
tir como auténtica una obra antigua cuando apoya Seria necesario, dice , dividir esta obra en dos
sus opiniones, y desecharla como falsa cuando no partes. La 1." deberia tratar de los libros de la Sa
está de acuerdo con ellas. ..." De hacer uso del ar— grada Escritura y de sus autores: en la 2." deberian
gumento negativo cuando les es útil, y de mirarlo estar reunidos los conocimientos generales necesarios
como nulo cuando les es contrario. 5." Para averi para la inteligencia de lo contenido en estos libros.
guar si una obra es ó no de tal autor, se apoyan La primera parte se dividiria en tres secciones.
principalmente en la semejanza ó la diferencia del La 1."tralaria de las cuestiones generales que con—
estilo que se encuentra entre este escrito y otros del ciernen á todo el cuerpo de la Biblia. La 2.º de cada
mismo autor; pero, fuera de que un autor no siem— libro en particular y de su autor; y la 3." de los li
pre tiene el mismo estilo, y que trabaja unas obras bros citados, perdidos, apocrifos, y de los monu
mas que otras, se necesitan mucho juicio, gusto y mentos que tienen relacion con la Escritura. Seis
esperiencia para poder juzgar; y los errores en este cuestiones ocuparian la primera seccion. La 1" so—
punto son muy comunes. 6." Algunos se han entre bre los diferentes nombres dados á la Biblia, del nú
gado á conjeturas, han disputado sobre todas las cir mero de los libros que la componen , y las diversas
cunstancias de un hecho, han trabajado por suscitar clases que de ellos se han hecho. La 2." trataria de
dudas, y se han afanado mas bien por embrollar que la divinidad de las Escrituras, y se la probaria con
por aclarar los sucesos importantes de la historia ecle tra los gentiles y los incrédulos; de la inspiracion de
siástica. las profecias: se ecsaminaria en qué sentido han sido
Demuestra que, observando literalmente todas las inspirados los autores sagrados, si les han sido inspi
reglas eslablecidas por los críticos, se puede probar la radas las palabras lo mismo que las cosas, si lodo lo
verdad de muchos hechos que han mirado como fal que estos libros contienen es de fé hasta los hechos
sos ó dudosos, y la autenticidad de muchas obras que históricos y las proposiciones de fisica. La 3.", de
han rechazado como suplantadas ó apócrifas, y al cón la autenticidad de los libros sagrados, de los medios
trario. Ellos mismos discordan en el juicio que forman de distinguir los libros canónicos de los que no lo son.
sobre un hecho ó un escrito; unos lo admiten, otros Se dilucidaria la cuestion tantas veces suscilada en
lo desechan: todos, sin embargo, aseguran que siguen tre los católicos y los protestantes, á saber: si la
unas mismas reglas. Tampoco están acordes entre sí Iglesia juzga á la Escritura. Se esplicaria la diferen
en lo que se debe entender por auténtico, apócrifo, cia entre los libros protocanónicos y los deuteroca
canónico, supuesto, etc.; no todos dan á estas pala nónicos. La ..." sobre las diferentes traducciones de
bras la misma significacion. la Biblia, y las diversas ediciones de cada version,
Con estas supuestas reglas han impuguado los pro de la antigüedad de las lenguas, de los caracteres y
testantes los libros de la Sagrada Escritura y los mo de su origen; se ecsaminaria si el hebreo es la primera
numentos eclesiásticos que no les eran favorables. Los lengua, hasta qué punto se puede confiar en la fideli
incrédulos han sobrepujado esta audacia, y han que dad de las copias, de los manuscritos, de las traduc
rido trastornar todos los títulos de la revelacion. Seria ciones, de las ediciones, y sobre su integridad; si la
sensible tener que echar en cara á escritores católicos Vulgata es la única traduccion auténtica, y en qué
el haberles dado las armas. Ya el P. Lambrussel, je sentido; si debe ser permitida ó prohibida la lectura
suita, puso de manifiesto las funestas consecuencias de las traducciones en lengua vulgar. La 5." del esti
de este sistema en un Tratado sobre los abusos de la lo de la Escritura, de las causas de su oscuridad, de
crítica en materia de religion, en 2 vol. en 12,", im los diferentes sentidos que puede tener, y en los que
preso en París en 1711. ha sido citada; del uso que se puede hacer de estos
El abate Renaudot ha hecho ver el error con que diversos sentidos, ya en la controversia, ya en el
se ha querido juzgar de la autoridad de las antiguas púlpito, ya en la teologia mística: se ecsaminaria si es
liturgias, como se juzga de la autenticidad de los es— permitido hacer aplicacion de ella á objetos profanos.
critos de un autor cualquiera; pues la autoridad de La 6.” cuestion trataria de la division de los libros
estas liturgias no emaná del personaje cuyo nombre en capítulos y en versículos, de la concordancia
llevan, sino de las Iglesias que siempre las han ob— armonia de los comentarios, del uso que se debe ha
servado. Liturg. Orient. collect., tom. 1, p. 2, etc. cer de los rabinos, del Talmud, de la Gemara, de la
, De todas estas observaciones se deduce que no de cabala: se veria qué autoridad tienen los comentarios
bemos atenernos ciegamente al juicio de nuestros me— y las homilías de los PP. sobre la Escritura, qué pe
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so tienen las esplicaciones de los comentadores mo— cibido de Jesucristo y de los apóstoles, y que nos los
dernos y cuáles son los mas útiles para la inteligencia dá como le han sido confiados: autoridad fundada en
de la Sagrada Escritura. . . . . las mismas pruebas que la divinidad de la religion
La segunda seccion esaria dividida en otros tan— cristiana.
tos tratadilos como libros tiene la Escritura; en ella se No necesitamos las discusiones de la crítica sobre
haria su análisis é historia, se investigaria quién es este punto mas que para vencer la obstinacion de los
el autor de cada uno de ellos, en qué tiempo y de qué herejes y de los incrédulos: la fé del simple fiel esta
modo lo escribió. apoyada en mejores fundamentos. V. FE.
La tercera contendria tres cuestiones. La 1." se
ocuparia de los libros citados en la Sagrada Escritura “Criticismo. El escepticismo (véase esta pa
y que ya no ecsisten: se ecsaminaria qué libros eran º del que fue representante en Inglaterra Hu
estos, qué podian contener, quiénes fueron sus auto— me, hizo nacer en Alemania el criticismo de Kant,
res en cuanto se pudiese averigiar. La 2.” de los el que á su vez fue causa del desarrollo del sistema
libros apócrifos que se han querido hacer pasar por de Fichte y posteriormente del de Hegel, Schelling,
canónicos , ya ecsislan lodavia, ya se hayan perdi Bouteweck, y otros.
do. La 3.º, de las obras que pueden tener relacion El filósofo de Koenisgsberg, buscando los elemen—
con la Escritura, como las de Filon, de Josefo, de los del conocimiento humano, reconoció dos elemen
Mercurio Trismegisto, delas Sibilas, los cánones apos los de él, ó mas bien de la esperiencia que le pro
tólicos, etc. - duce el sugeto y el objeto; mas de forma que el suge
La segunda parte contendria ocho tratados: 1." La to, al recibir impresiones del objeto, le modifi
geografia sagrada. 2." El origen de la division de los ca segun las formas necesarias subsistentes en él
ueblos, ó un comentario sobre el capítulo décimo á priori, de donde se sigue que el alma no puede co
del Génesis. 3.º La cronología de la Escritura, con nocer el objeto de ningun modo como en realidad es,
la que seria necesario comparar las de los egipcios, la sino solo el fenómeno ó la apariencia del objeto, por
de los asirios y babilonios..." El origen y la propa ue solo percibimos los objetos por las formas subje
cion de la idolatria. 5." La historia natural relati tivas que les damos; ahora bien, estas formas sola
va á la Escritura; en esta se hablaria de los anima— mente manifiestan nuestro modo de concebir los ob—
les, de las plantas, de las piedras preciosas, elc., dejetos y no como son en realidad. Las cosas en sí
ue en aquella se hace mencion. 6." De los pesos, medimismas, que Kant, llama noumenos, ó seres de ra
¿ y monedas de que se sirvieron los hebreos. 7." De zon, nos son absolutamente desconocidas; porque la
los idiotismos, ó propiedades de las lenguas en que esperiencia de los sentidos solo nos da fenómenos, es
decir, apariencias, y la inteligencia solo nos presenta
los libros santos se escribieron , de las fras s poélicas
y proverbiales, de las figuras, de las alusiones , de las
un orden puramente ideal; de consiguiente el alma
parábolas, etc. El 8." seria un compendio histórico de y Dios, que no pueden ser conocidos por la espe—
os diversos estados del pueblo hebreo hasta el tiempo riencia de los sentidos, se encuentran en la clase de
de los apóstoles, de las alteraciones acaecidas en su puros conceptos de razon, ó noumenos, de suerte que
gobierno, en sus costumbres, en sus usos y en sus no podemos saber si ecsisten verdadera y sustancial
opiniones. - -
mente, y ni aun si son posibles. Kant, pues, los eli
Cuanto se dijese sobre estos diversos objetos, no minó de la ciencia, que limitó á la somatologia ó
seria nuevo en el fondo, pero podria serlo en el modo ciencia de los cuerpos.
de presentarlo; seria un trabajo util, sobre lodo para Pero, en último resultado, á qué se reducia esta
los jóvenes teólogos, reunir en una sola obra y meló— ciencia fenomenal de los cuerpos, segun los principios
dicamente materiales esparcidos en los escritos de un de Kant? Facil es conocerlo con solo observar que
gran número de sabios. La biblioteca sagrada del pa Kant colocó el tiempo y el espacio entre las formas
dre Lelong indicaria al que quisiera emprenderla las subjetivas, y que hasta el principio de casualidad es
principales fuentes donde deberia beber. , . para él , una categoria puramente subjetiva, de lo
Debemos añadir que la equidad natural dicla tra que resultaba que las causas de estos fenómenos, es
tar la críticasagrada con lanta imparcialidad como la decir, los cuerpos, causas de nuestras sensaciones,
critica profana; que es una injusticia de parte de los eran tambien absolutamente subjetivas, y de con
incrédulos, juzgar los libros de los judios de diversa siguiente que no está en manera alguna probado que
manera que juzgan los de los chinos, inios, persas tengan una ecsistencia fuera de nosotros. De este
y mahometaños, y establecer para los primeros re modo cualesquiera que fuesen las verdaderas in
glas de crítica de que no se alreverian á servirse para tenciones de Kant, nos hace caer, dice Rosmini, en
impugnar los segundos, Si cuando estos vieron la luz el idealismo mas universal, en la ilusion subjetiva
por la primera vez en Europa, un censor cualquiera mas profunda. Nos encierra en una esfera de sueños
hubiera hecho contra su aulenticidad las mismas ob de que no nos es permitido despertar para ver al
jeciones, que se han repetido de un siglo á esta par guna realidad hasta el punto de que no solo pone
te contra nuestros libros sagrados, hubiera merecido al hombre en la incertidumbre de lo, que sabe, sino
el desprecio y la indignacion de los sabios. que le declara incapaz de saber nada. Este es el es
Pero es necesario acordarse siempre de que la au cepticismo perfeccionado, consumado; el escepticis—
doridad de estos libros santos no está fundada úni mo, que bajo el nuevo nombre de criticismo, ano—
«amente en la esactitud de las reglas de critica como nada hasta la humanidad, la que no ecsiste sino por
ban supuesto los incrédulos copiando á los protestan el conocimiento.
es, sino en la autoridad de la Iglesia que los ha re Sin embargo, á pesar de que quitaba á la razon
4.
 CRI 557 CRO
teórica toda posibilidad de conocer la existencia de de la actividad primitiva del yo. Ahora bien; entre
Dios, la espiritualidad y la inmortalidad del alma, estas cosas es preciso colocar al mismo Dios, el que
la vida futura, en una palabra, todas las verdades p¿ al no yo. De aqui, aquel acto de locura de
melafísicas; Kant por otra parte las admitia en virtud Fichte, que prometió un dia á sus oyentes: «que en
de la razon práctica como postulados, y las recibia la prócsima leccion estaba dispuesto á crear á Dios».
como ciertas por las recesidades prácticas, es decir, Ultima espresion del orgullo de una criatura inteli
porque en la práctica de la vida no se puede pasar sin gente, fórmula la mas abreviada de la malicia del
ellas. Coloca la parte histórica del cristianismo, ó de angel reprobado, si la ligereza de la edad y la irre
la revelacion en la clase de los fenómenos: su relacion flecsion del jóven que la pronunció no mereciesen
entra naturalmente, segun la teoria de Kant, en mas bien lástima que indignacion. Con este egoismo
la clase de noumenos, es decir, en la de aque metafísico; ¿en qué venian á parar las relaciones rea—
llas cosas que nos es absolutamente imposible co les del hombre con Dios? ¿Qué era de la realidad y la
I10("e". objetividad del cristianismo? Inutil es hacerlo notar.
Se vió, pues, burlada la esperanza de los que creye Combinando de una manera brillante la objetivi
ron que el cristianismo tendria una aliada en la nueva dad fenoménica de Kant, el idealismo absoluto. ( 2
metafísica, cuando la filosofia alemana reemplazó en "Fichte y el realismo absoluto de Schelling, su maes
el mundo á la del siglo XVIII. El espiritualismo de tro, produjo légel un nuevo sistema cuya base es la
Kant conducia al mismo resultado que el sensualismo idea. Esta objetividad, que para Kant era fenoménica
de Voltaire. La filosofia se limitaba á cambiar las ar— para Fichte un límite desconocido del yo, la colocé
mas enmohecidas del último siglo, y á llevar la cues— égel en la idea misma, donde el entendimiento la
tion á otro terreno. contempla como un ser distinto de sí; de este modo
Esto se manifestó con toda claridad en el libro de el pensamiento es la ecsistencia, y la ecsistencia es el
Kant, titulado De la religion dentro de los limites de la pensamiento. La idea, que al principio no es mas que
razon, el que todavia sirve de fundamento á todas las una esencia lógica, se transforma en realidad en me
innovaciones de nuestros dias. Es tristemente curioso dio de sus momentos ó de sus movimientos, y produce
ver en esta obra á Kant apoyarse en Bolingbroke que la naturaleza universal, el entendimiento y Dios. El
tantos materiales habia ya dado á Voltaire. ¿Qué son entendimiento humano, pues, en cuanto piensa, es
para el filósofo de Koenigsberg las Sagradas Escritu para flégel la realidad espiritual absolnta. Ahora bien;
ras? Una continuacion de alegorias morales, una espe— como el cristianismo, formando parte de la idea, está
cie de comentario popular de la ley del deber. El mis contenido y comprendido tambien en el sugeto que
mo Jesucristo no es mas que un ideal, que vive soli piensa, resulta que no es otra cosa que un desarrollo
lariamente en la conciencia de la humanidad. Por lo natural, un momento: un movimiento de esta idea en
demas, eliminando de este pretendido cristianismo la el pensamiento. En una palabra, el sugeto que piensa,
resurreccion, no quedaba en realidad mas que un saca de sí mismo el cristianismo, sin necesitar una
Evangelio de pura razon, un Jesucristo abstracto sin revelacion esterior; y cuando el filósofo toca á la al
el pesebre y sin el sepulcro. tura y plenitud de la ciencia, posee en su idea el
Desde que salió á luz esta obra, ya no fue posible verbo, el logos en su realidad y en su presencia abso
engañarse sobre la especie de alianza de la nueva fi lula. Pero como todos no son filósofos, ni capaces de
losofia con la fé Evangélica. En este tratado de paz, elevarse á tanta altura para acomodarse á la ignoran
la crítica, el razonamiento, ó mas bien, el escepticismo cia de las inteligencias vulgares, consienten en de
se coronaron á sí mismos. Si dejaban subsistir la reli jarles el cristianismo histórico y la revelacion esterior.
gion era como una provincia conquistada, cuyos limi Nada diremos de los sistemas que mas ó menos se
tes señalaban á su capricho, como claramente lo de resienten del pantheismo, como los de Schelling, de
cia el título de la obra de Kant. Bouterweck, de Krug y otros.
Aun debia avanzar mas el cristicismo. Era facil Del estracto que hemos hecho de los tres sistemas
preveer que no todos los talentos se acomodarian á los de Kant, de Fichte y de Hégel se deduce con evi
postizos postulados de Kant. Una vez dado el impul dencia que sus autores han querido, cada uno á su
S0, no era posible detenerse en esta rápida pendiente. modo, construir el mundo y á Dios á priori con pu
Un talento atrevido, Fichte, se dió á conocer y se pre ros «onceptos de razon; Kant con sus formas subjeti
sentó para deducir todas las consecuencias del siste vas necesarias, Fichte con la actividad del yo, y Hé
ma de su maestro y para desarrollarlo de este modo gel con los movimientos de la idea. Pero aparte de
completamente. El yo fenomenal de Kant llegó á ser, algunas ventajas indirectas y accidentales que sus
segun la doctrina de Fichte, el yo absoluto, fuera del elucubraciones han podido suministrar á la ciencia,
que no hay realidad alguna ni aun fenoménica ó apa es indudable que en general solo nos han dado leo
Tente. rias vanas y absurdas, y lo que es peor, irreligiosas
En virtud de su propia actividad, el yo se forma por é impías. -

sí mismo, lo que equivale á decir que se produce ásí Aunque estas teorias encontraron muchos partida
mismo; y despues por esta misma actividad, al reple rios y admiradores en Alemania, han sido victorio
garse sobre sí por un acto idéntico, encuentra un lí— samente combatidas y refutadas en Italia por Baldi
mite, un no yo, por el que tiene conciencia de sí; notti, Bonelli, Galluppi, Perrone y Rosmini.
pero este no yo no existe antes del yo, ni indepen Crónicas. V. PARALIpóMENos.
dientemente del yo. La misma actividad del yo lo fija
y lo crea, por decirlo asi; de forma, que la existen— Cronología de la ruistoria santa. Los
cia de todas las cosas que se pueden concebir emana ncrédulos de nuestro siglo han hecho gran ruido so
-
TOM0 I. . 76
 CRO 558) CH0
bre la dificultad que hay de formar una cronologia geografia y la historia natural son la piedra de toque
esacta de la historia santa, sobre la variedad de opi para juzgar de la falsedad de una revelacion. Quizá
niones y de hipótesis inventadas con este motivo por seria menos absurdo decir que es una preocupacion
los sabios. Es dificil conciliar el testo hebreo con las para presumir que es verdadera, porque es indigno de
versiones de acomodar los autores sagrados entre sí Dios el comunicar á los hombres por revelacion cono
ó con los historiadores profanos. Véase CINA, EGIP - cimientos que nunca han servido mas que para ha
cios. Nuestros críticos quisquillosos han dicho que, si cerlos orgullosos, indóciles é incrédulos. La verdad
Dios fuese el autor de esta historia, no habria permi es, que estas pretendidas altas no prueban nada, tanto,
tido que escritores á los que se dignaba inspirar ca que no se está en estado de demostrar invenciblemen
yesen en ninguna falta y se opusiesen los unos á los te que son tales; y nuestros adversarios no lo han con
otros. Cuando se les ha respondido que la mayor par seguido todavia con respecto á las que creen hallar
te de estas faltas verdaderas ó aparentes podian venir en la historia santa. Muchos sabios les han hecho ver
de los copistas y no de los autores sagrados, han re que no juzgan de ello mas que por ignorancia, y que lo
plicado que Dios debia velar lo mismo por las copias, mismo acaece con las contradicciones. -

que ¿ originales; que escritos divinamente ins En la historia de la astrologia antigua (c. 1, S. 6,
pirados, debian ser divinamente copiados. Eclaircis, l. 1, S. 11 y siguientes), ha demostrado el
De modo, que segun estos grandes talentos, luego autor que comparando los diferentes métodos, segun
qne Dios quiso tomarse el trabajo de instruirnos de los que los diversos pueblos han calculado el tiempo,
bió darnos no solo las lecciones necesarias para re convienen las diferentes cronologias y no difieren
glar nuestra fé y nuestras costumbres, sino tambien mas que en algunos años con respecto á las dos épo—
todos los conocimientos curiosos que nos agradase cas mas memorables, á saber, la creacion y el diluvio
ecsigirle, y quitarnos el trabajo de hacer estudios, universal; que todas estan acordes en suponer la mis
investigaciones y discusiones para adquirirlos. ma duracion desde el principio del mundo hasta la
Preguntámosles en qué podia servir un sistema era cristiana, siguiendo el cálculo de los Setenta. En la
esacto y completo de cronologia desde la creacion has coleccion de la academia de inscripciones, hay muchas
la nuestros dias para perfeccionar la fé ó las costum memorias en las que se ha conseguido perfectamente
bres. Desde que estamos seguros que Dios ha criado ilustrar las dificultades concernientes á la historia de
el mundo y la raza humana, que nuestro primer pa los reyes de Israel y de Judá, y de otros hechos
dre pecó y ha sido castigado con toda su posteridad, particulares: ¿no es esto suficiente para que pre
y que Dios le prometió un redentor; que despues de sumamos que se pueden desvanecer las mismas di
muchos siglos castigó á esta raza criminal con un di ficultades que puedan hallarse todavia en la historia
luvio universal; una vez que es cierto, que Dios ha Santa?
dictado leyes á los hebreos por medio de Moisés; que La mayor de todas es la de conciliar el testo hebreo
saeó de entre ellos profetas para anunciar sus desig con la version de los Setenta y con el testo samaritano
nios y renovar sus promesas; que por último, tuvo á respecto de la fecha del diluvio, y relativamente á la
bien cumplirlas, que envió á su Hijo único para res edad de los patriarcas, antes ó despues de esta gran
catar al género húmano y darle nuevas lecciones; revolucion. Segun el testo hebreo no ocurrió sino
¿qué nos importa saber en qué tiempo han sucedido al rededor de seis mil años desde la creacion has
estos varios acontecimientos, cuántos años han pasa la nosotros, y el diluvio se verificó el año del mun—
do entre uno y otro y á qué época de la historia do 1656. Los Setenla añaden 1860 años mas á la an
profana se deben referir? Este conocimiento, sin duda, tigüedad del mundo; el Pentatéuco samaritano no
serviria para satisfacer nuestra curiosidad; pero no conviene con ninguno de los dos. El hebreo coloca
vemos en qué contribuya para hacernos mejores. el diluvio 238 antes de Jesucristo; los Setenta 3617;
¿Estamos mejor instruidos de la cronologia de las hé aquí cerca de 1300 años de diferencia; Para saber
demas naciones que dela de los hebreos? En el origen de dónde ha podido provenir, se hallan divididos los
de las sociedades, ocupados únicamente los pueblos sabios; los unos piensan que los hebreos han acorta
en proveerá su subsistencia, no tenian tiempo ni de do espresamente su cronologia, pero no se ha podi
componer anales ni de levantar monumentos. do adivinar con qué motivo, ni en qué tiempo, ni
Nada hay mas cierto que las primeras épocas de cómo hubieran podido alterar todos los ejemplares
la historia china, la de los indios es todavia mas os— del testo. Otros creen que son los Setenta los que han
cura; lampoco se ha llegado á ordenar de una ma alargado la duracion del tiempo para aproximarse
nera incontestable las dinastias de los egipcios, ni á á la opinion de los egipcios que suponian al mundo
desenredar el principio de la monarquia de los asirios, muy antiguo; otros, por último, han dado la prefe
Los griegos no llegaron á escribir sino muy tarde, ni rencia al testo samaritano, que guarda una especie de
aun se sabe con certeza la época en que vivió Home medio entre los otros dos monumentos. Ninguno de
ro. Los primeros hechos de la historia romana han pa estos tres pareceres está fundado en pruebas demos
recido fabulosos á muchos sabios, y nosotros nos ve. trativas.
mos obligados á empezar la nuestra en el reinado de Nuestros filósofos, mas instruidos que todos los sa—
Clodoveo. Si Dios no hubiera suscitado á Moises para bios, no han tratado mas que de despreciar todos los
darnos un débil conocimiento del origen del mundo, trabajos de estos; han emprendido crear una nueva
no sabriamos de él una palabra, y nuestros filósofos, cronologia, fijar la duracion del mundo y las épocas
con todos sus talentos para la adivinacion, no hubie— de su naturaleza por las conjeturas de la física, por
ran podido conocer nada. la inspeccion del globo, por los materiales de los
Segun su opinion, las faltas contra la croeologia, la montes, por el modo con que estan dispuestas las
 CRO 559) CRO -

capas por los desbordamientos de la mar, etc. La setecientos cuarenta y nueve de la fundacion de Ro
cuestion es saber si lo han adivinado esaetamente, si ma, el cuarto de la olimpiada ciento noventa y tres,
todos los montes del globo estan construidos como el cuatro mil setecientos nueve del periodo Juliano,
los que ellos han ecsaminado, si no han alterado los cuatro años antes de la era vulgar, bajo el consuladó
hechos para acomodarlos á sus ideas, etc. Muchos undécimo y duodécimo de Augusto, y el segundo de
físicos han demostrado ya que la mayor parte de sus Cornelio Sila. Este divino Salvador padeció la muer
observaciones son falsas. (Cartas fisicas y morales so— te por rescatarnos bajo el consulado de Servio Sulpi
bre la historia de la tierra y del hombre; estudios de cio Galba y de L. Sila, un viérnes, tres de abril, se
la naturaleza, etc). gun la tradicion constante de la Iglesia, á la hora
Los que han querido impugnar la historia santa nona del dia, es decir, á las tres de la tarde, despues
r las observaciones astronómicas no han salido me de haber vivido treinta y seis años, tres meses, nueve
jor con su intento. Podemos desde luego atenernos dias y quince horas, á contar desde la mitad de la
en esto con toda seguridad á lo que la Escritura nos noche, que comienza el veinte y cinco de diciembre
enseña. V. HistoRIA SANTA, MUNDo. del año Juliano cuarenta y uno, que es el de su maci—
miento, hasta las tres de la tarde del viérnes tres de
X4 Cronología. Es la doctrina de los tiempos abril, del año Juliano setenta y ocho, que fue el de su
mUerte.
y de las épocas. Tomando el término de Cronologia
por lo que se llama cómputo eclesiástico, no tenemos Hé aquila verdadera época del nacimiento y de la
necesidad de estendernos mucho sobre esta palabra: muerte de Jesucristo, segun el cómputo de los mas
sin embargo advertiremos que se distinguen en la Cro hábiles cronologistas. Asi la era vulgar, que no dá
nologia dos clases de eras cristianas y tres de épocas; al Salvador mas que treinta y tres años, es demasia
este es el lugar de hablar de ellas. do breve.
La primera era cristiana es llamada la era vulgar, Mas aunque este error esté ya hoy demostrado, no
porque es la que está en uso; tiene á Dionisio el pe tiene, por decirlo asi, remedio; habiendo sido gene
queño por autor. Este sábio compilador fue de pare ralmente seguida la era vulgar por todos los autores,
cer, hácia principios del siglo VI, que los cristianos, no es posible separarse de ella. Los autores del tra
por respeto ó reconocimiento hácia el Salvador, con— tado del arte de verificar las fechas son los que hacen
tasen los años de su nacimiento, en vez de contar co— este razonamiento; otros le habian hecho antes, y de
mo se hacia antes por los años de los cónsules roma aqui nace la distincion de las eras cristianas en vul
nos, lo que fue aprobado y seguido. Desde entonces gar y verdadera. Esto, ademas de lo que se acaba de
no se conlaron ya los años sino desde esta época, bajo leer, es pues lo que adelanta cuatro años en la era
eslas espresiones: el año de gracia, el año de nuestra vulgar: de suerte que en vez de decir ahora 1846,
salvacion, el año de Jesucristo; á nativitate, ab incar— que se cuentan segun la era vulgar o comun, debere—
natione Christi. Estas dos últimas maneras de contar mos contar 1850 desde la verdadera época del naci—
son diferentes en nueve meses. La de la encarnacion miento de nuestro Salvador.
no es comun; ha sido puesta en uso por un efecto de Hay otras eras, tales como las de España, de los
los sentimientos de piedad que Dionisio el pequeño seleucidas y de los turcos.
quiso inspirar á los fieles, no se detuvo en el naci— En cuanto á las épocas son, segun hemos dicho,
miento; se fue al tiempo de la encarnacion; se vino de tres maneras, las primeras son sagradas, las se—
tambien al de la pasion, y de aqui tantas dificultades gundas eclesiásticas y las terceras civiles ó políticas.
en la fecha de muchos documentos antiguos. Las épocas sagradas, son las que se toman de la
La segunda era cristiana es llamada la era verda Biblia, y conciernen particularmente á la historia de
dera, pues para entender lo que es era verdadera dis— los judios, como
tinguida de la era vulgar, es necesario saber que 1º El diluvio, año del mundo, 1656.
los mas hábiles cronologistas convienen hoy casi 2.º La vocacion de Abraham, 2083.
unánimemente en que la era de que nos servimos es 3.º La salida de los hebreos de Egipto, 2513.
demasiado corta, y cuatro años posterior al nacimien ...º La fundacion de templo de Salomon, 2992.
to del Salvador, porque habiendo nacido Jesucristo 5." La libertad concedida á los judios por Cyro,
en el reinado de Herodes el grande, y la muerte de 3.68.
este príncipe ocurrida ciertamente el año Juliano cua 6." El nacimiento del Mesías, la salvacion y luz
renta y dos, y el setecientos cincuenta de Roma, an de los gentiles, l.000.
tes de fijar el nacimento del Salvador, se sigue nece— 7.º La destruccion del templo de Jerusalen por
sariamente que nació cuatro años antes de la era que Tito, y la dispersion de los judios el año del mundo
seguimos, puesto que el año Juliano cuarenta y dos y 07, el año de Jesucristo 74 y el de la era vul
el selecientos cincuenta de Roma preceden á esta gar 70.
cra en cuatro años. Segun estos cronologistas, Jesu Las épocas eclesiásticas son las que sacamos de los
cristo nació el veinte y cinco de diciembre, dia en autores que han escrito la historia de la Iglesia des—
que ha colocado siempre la tradicion su nacimiento, de el principio de la era vulgar, como son:
el año 000 de la creacion del mundo, el año cuaren— 1.º. El martirio de S. Pedro y de S. Pablo en
ta y uno de la era Juliana, ó desde la correccion del Roma, el año de la era vulgar 67.
calendario por Julio César, el cuarenla de Augusto, 2.º La era de Diocleciano ó de los mártires el
desde la muerte de César, ó el veinte y siete, á con año 302.
tar desde la batalla de Accio, el treinta y seis desde 3.º. La paz dada á la Iglesia por Constantino el
que Herodes habia sido declarado rey de Judea, el Grande, primer emperador cristiano, año 312.
 CRU 560 CRU
4." El concilio de Nicea, celebrado para conde dicar contra los albigenses. Esta congregacion se esta
nar la herejía de Arrio, 325. bleció y multiplicó en Francia. Los de Santa-Cruz
Las épocas civiles ó políticas son las que se refie de la Bretonniere de París fueron reformados por
ren á los imperios y monarquías del mundo, como: el cardenal de la Rochefocauld; pero fueron su—
1.º La toma de Troya por los griegos el año del primidos poco tiempo despues.
mundo 2820, 118 antes de la era cristiana, y 08 Los cruceros ó porta-cruz con la estrella de Bo
antes de la primera olimpiada. hemia pretenden haber venido de la Palestina á Eu—
2.º La fundacion de Roma, segun los datos de ropa; esto no es cierto. Ines, hija de Prisnislao, rey
Fabio Pictor, primer escritor de los asuntos de Roma, de Bohemia, instituyó esta Orden -en Praga, el año
está fijada un poco antes del principio de la octava 123. Tienen actualmente dos generales y son muy
olimpiada el 13 de las calendas de mayo, es decir, el mUl InCTOSOS.
año del mundo 3256, y 78 antes de la era vulgar.
Sin embargo Varron la pone cinco años antes, el año Cruciferario. V. CRUCERo.
del mundo 3251.
El conocimiento de la cronologia, ó el arte de fijar Crucifijo. lmágen de Jesucristo clavada en la
el orden y el tiempo de los acontecimientos es de cruz. Los católicos honran a crucifijo en memo
muy grande utilidad en materias eclesiásticas. San ria del misterio de la redencion, para escitarse al
Agustin reconocia que este conocimiento sirve para reconocimiento de este beneficio: los protestantes han
comprender mejor los libros santos: Quidquid igitur desterrado de sus iglesias el crucifijo. En tiempo de
de ordine temporum transactorum indicat ea, quae la pretendida reforma de Inglaterra apenas pudo con
apellatur historia, plurimum nos adjuvat ad sanc servar uno en su capilla con mucho trabajo la reina
tos libros intelligendos (lib. 11 de Doct. chr., c. 28, Isabel. No sabemos por qué los protestantes han con
n. 2). cebido tanto horror hácia un signo tan capaz de esci
El nº santo advierte que la ignorancia del con lar la piedad. Sin embargo, todavia se le vé en mu
sulado, bajo el cual nació Nuestro Señor y padeció, chos templos luteranos.
ha hecho caer á algunos en grandes yerros, como En otro tiempo hubiera tenido escrúpulo un cató—
creer que el Señor era de edad de 6 años cuando lico de no poner en su cuarto un crucifijo: hoy solo
padeció. Ignorantia consulatus, quae natus est Domi el pueblo observa este uso piadoso; es peligroso per
nus, et quo passus est, nonnullos coegit errare, ut diendo de vista la imajen olvidar tambien lo que re
putarent quadraginta sea annorum aetate passum esse presenta. El culto de la cruz y el uso de los crucifijos
Dominum (Ibid.). Lo que hemos dicho antes acerca de se hicieron mas generales en la Iglesia inmediatamen
la era verdadera confirma lo que dice S. Agustin. te despues de la invencion de la Santa Cruz. V. El
(Diction. de Droit Canon.) ramentario, por Grandcolas, primera par—
te, p. 66.
Crucero. IIay tres Ordenes ó congregaciones
de canónigos regulares á que se ha dado este nom Crucifixion. Cualquiera que haya sido el mé
bre; una en llalia, otra en los Paises Bajos, y la ter todo que los romanos y los judios usaban para cru—
cera en Bohemia. cificar á los que eran condenados á morir en este
Los primeros pretenden descender de S. Clelo, y suplicio, no podemos dudar de la manera con que
-
dalar desde la invencion de la Santa Cruz en el rei Jesucristo lo fue. Ninguna incertidumbre deja en este
nado de Constar tino; esta es una tradicion fabulo punto la narracion de los evangelistas; en ella se
sa. Lo que hay de cierto es que ya ecsistian á me dice que Jesucristo hizo ver y palpar á Slo. Tomas
diados del siglo XII, puesto que Alejandro III per— despues de su resurreccion las llagas formadas en sus
seguido por el emperador Barbarroja se refugió en manos y en sus pies por los clavos (Joan., c. 20,
un monasterio de cruceros, los tomó bajo su protec .25 y 27). Todavia se ven vestigios de los clavos en
cion en 1169, y les dió la regla de S. Agustin. Pio V a verdadera cruz conservada en Roma, y cuando
aprobó de nuevo este instituto; pero habiéndose re fue hallada por Sta. Elena, tambien se hallaron en
lajado en él la disciplina regular, fue suprimido en ella los clavos con que Jesucristo fue en ella clavado.
1656 por Alejandro VII. Se dice que ecsistian dos Este suplicio era cruel, y no , es de estrañar que
ó tres monasterios en la Inglaterra, y catorce en Ir Jesucristo acabado por una noche entera de sufri
landa, procedentes de los de Italia; llevaban un bas mientos, por los azotes, por la fatiga de llevar
ton que terminaba con una cruz. su cruz, por las llagas de sus miembros, solo conser
Fueron fundados los cruceros en Francia y en los vase tres horas su vida y muriese sobre la cruz aiites
Paises Bajos, el año 1211, por Teodoro de Celles, que los dos ladrones crucificados con él. Ningun ene
canónigo de Lieja, que sirvió en Palestina el año migo del cristianismo se atrevió á dudar en ningun
1188, y habia visto en ella cruceros. A su vuella tiempo que Jesucristo hubiese espirado sobre la
entró en el estado eclesiástico, asistió en calidad de cruz; pero en nuestros dias ha habido algunos que
misionero á la cruzada contra los albigenses y ha han afectado dudar que estuviese realmente muerto
biendo vuelto á su pais el año 1211, obtuvo del cuando fue bajado de la cruz. No han notado que ha
obispo de Lieja la Iglesia de S. Tibaldo, cerca de cian desaparecer una de sus mas pomposas objecio
la villa de Hui, donde echó los cimientos de su Or nes contra la resurreccion. Dicen que si Jesucristo
den con otros cuatro compañeros. Inocencio IV y Ho hubiese resucitado verdaderamente, se habria pre
nº III la confirmaron. Teodoro envió religiosos á sentado en público para confundir á sus enemigos.
To'osa que se unieron con Sto. Domingo para pre Pero por la misma razon si no hubiera muerto, solo
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en él hubiera consistido el aparecerse y manifestarse es maldecido por Dios; de aqui deduce S. Pablo que
á los judios si hubiese querido. Jesucristo nos redimió de la maldicion de la ley, ha
Constantino abolió con razon el suplicio de la cruz ciéndose él mismo objeto de maldicion (Gal., c. 3,
despues de su conversion al cristianismo. Desde este y. 13). Se concibe qué horror debió inspirar á los ju
instante no solo pasó, como dice S. Agustin, desde dios un crucificado, y cuántos milagros se necesita
el lugar de los suplicios á la frente de los emperado ron para obligará un gran número de ellos á re
res, sino de los suplicios á los altares. conocer áJesucristo por Mesias é Hijo de Dios. S. Pa
Muchos incrédulos pretenden que hay contradic blo dijo bien que Dios quiso manifestar al universo
cion entre los evangelistas sobre la hora en que Je su sabiduria y su poder, convirtiendo á los hombres
sucristo fue clavado en la cruz. S. Mateo, S. Marcos por el misterio de la cruz (I. Corint., c. 1, y.2%).
y S. Lucas, despues de referir la crucificion, dicen Lo que hay de estraordinario es que segun, la anti
ue desde la sesta hora hasta la novena, es decir, gua tradicíon de los doctores judios, fundada en las
esde medio dia hasta las tres, la Judea se cubrió de rofecías, el Mesias debia ser crucificado (Véase áGa
tinieblas; de donde resulta que el Salvador fue en atin, lib. 8, cap. 17).
clavado en la cruz hácia el medio dia. Pero S. Mar Los protestantes condenan como una supersticion
cos (c. 15, y.25), dice, hablando de los judios, era el cu'to religioso que tribulamos á la cruz; dicen que
la hora tercera, ó las nueve de la mañana, y le cruci— este culto no tiene fundamento alguno en la Escri
ficaron. Por el contrario, leemos en S. Juan (c. 19, tura Sagrada, y que no existen vestigios de él en los
y. 1), que era cerca de la sesta hora ó medio dia cuan tres primeros siglos de la Iglesia (Daillé, adver, cul
do Pilatos presento á Jesus á los judios que pidieron tum retig. latinor., lib. 5, etc). Debeinos, pues, pro
su muerte; no pudo, pues, ser crucificado hasta des bar lo contrario.
pues de medio dia. ¿Cómo conciliar todo esto? Muy Segun la reflexion de S. Pablo ¿? c. 2, 8,
fácilmente con un poco de reflexion. S. Juan no di y.), porque Jesucristo se hizo obediente hasta morir
ce que fuese la sesta hora precisamente, sino al re en una cruz, Dios quiere que se doble toda rodilla
dedor de ia hora sesta; no era, pues, aun medio dia al solo nombre de Jesucristo. Preguntamos qué dife
cuando los judios pidieron la muerte de Jesus y cuan rencia hay entre doblar la rodilla á este nombre sa
do Pilatos se lo entregó. Asi, añade el evangelista, grado, ó doblarla á la vista del signo de la muerte
y. 16, que en seguida lo condujeron al Calvario car del Salvador. Si el uno es un acto de religion, por
gado con la cruz; Jesucristo, pues, pudo ser crucifi qué el otro lo ha de ser de supersticion? A esto no
cado al medio dia como lo suponen los otros tres evan han contestado los protestantes. Sin duda, dirán,
gelistas. Cuando S. Marcos dice que era la hora de que el primero de estos signos de respeto se refiere
tercia y que lo crucificaron, debe entenderse que al mismo Jesucristo: y no se refiere á él tambien el
desde las nueve de la mañana los judios se dispusie segundo?
ron á crucificarlo despues que Pilatos se lo habia en En Minucio Felix, que escribió á fines del siglo II
tregado; de otro modo habria contradiccion entre el ó, principios del III, el pagano Cecilio dice, ha
y. 25 y y. 33 del mismo capítulo de S. Marcos. Es blando de los cristianos, c. 9: « Los que pretenden
evidente que en los y. 23, 2%, 25 y 26, este histo que su culto consiste en la adoracion de un hombre
riador no ha seguido el orden de los hechos ni pre castigado con el último suplicio por sus crímenes, y
tendido señalar la hora exacta. Esta circunstancía no del funesto árbol de su cruz, atribuyen á estos mal
era de mucha importancia para merecer tanta aten vados, altares dignos de ellos; honran lo que mere
cion; y aun cuando un copista por inadvertencia hu cen; c. 12. Todo lo que os queda son amenazas, su
biera puesto la hora tercera en vez de la hora sesta, plicios, cruces y horcas, no para adorarlas, sino para
no seria una gran desgracia. colgaros en ellas » Octavio le responde, c. 29: «Estais
muy lejos de la verdad cuando nos atribuis por
Cruz. Los judios usaban el suplicio de la cruz, bjeto ¿ nuestro culto un criminal y su cruz, cuan
pues se habla de él en el Deut., c. 21, y.22; pero no do pensais que hemos podido tomar por Dios un
se sabe si clavaban en ella al paciente. Sea de esto lo culpable ó un mortal.... No honramos ni deseamos
que quiera, el suplicio ordinario de los blasfemos suplicios, vosotros sois los que consagrais dioses de
era la lapidacion: la ley asi lo prescribia: por esto madera y adorais cruces de palo como partes de
los judios apedrearon á S. Esteban, como reo de blas vuestros dioses.»
femia, segun sus preocupaciones. Tertuliano contesta á la misma inculpacion (Apo—
Condenado á muerte Jesucristo por el consejo de log., c. 16). El que cree que nosotros adoramos la cruz
los judios por haber blasfemado, diciendo que era tiene en el ¿? nuestra misma religion. Cuando se
el Hijo de Dios (Mat., c. 26, y.65, 66), fue entre— consagra la madera que hace la forma, y la materia
gado á los romanos para ser ejecutado. Estaba termi es la misma, qué importa la figura si el cuerpo es de
nantemente profetizado que los judios le entregarian un Dios? La Minerva de Atenas, la Ceres de Faros
á los gentiles para que le azotasen y crucificasen no son mas que un tronco informe de madera.... Ado
(Mat., c. 20, y, 19). Esta circunstancia no podia rais las victorias con sus trofeos cargados de cruces,
haber sido prevista naturalmente; los judios hubieran los ejércitos adoran sus banderas, en las que brillan
podido apedrearlo, como quisieron hacerlo mas de las cruces en medio de los ídolos, etc. (Idem ad natio
una vez, y como lo hicieron con S. Esteban, hubieran nes, l. 1, c. 12.)
podido pedir á Pilatos este suplicio mas bien que el llé aqui, dicen los protestantes, dos autores del
de la cruz. - siglo III que sostienen que los cristianos no adora
En el Deuteronomio se dice que un crucificado ban la cruz. Nada de eso. Minucio Felix niega que
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los cristianos honrasen las cruces ó los suplicios con Celso que se jactaba de conocer bien el cristianismo.
que para hacerles morir se los martirizaba; pero no Los PP., pues, no ignoraban las verdaderas razones
se justifica de honrar la cruz de Jesucristo como ado que destruyen la ignominia de la cruz, pero no que
raban al mismo Jesucristo, puesto que para él son rian servirse de ellas fuera de sazon.
lo mismo. Tertuliano no niega el ¿, se limita á Aun cuando la cruz mereciese respeto, dicen los
manifestar que los paganos hacian lo mismo. protestantes, por lo que representa y por las ideas
Juliano renovó esta acusacion en el siglo IV: «Ado ue nos recuerda, no por eso seria menos ridículo
rais, dice, el árbol de la cruz, haceis esta señal sobre liga la palabra, suponerla capaz de sentimiento,
vuestras frentes, la grabais en las puertas de vues de accion, de virtud, de poder decir que oyó las úl
tras casas.» S. Cirilo responde que muriendo Jesu timas palabras de Jesucristo moribundo, que hace
cristo en la cruz redimió, convirtió y santificó el milagros, que auyenta los demonios, que es la fuente
mundo.» «La cruz, dice, nos lo recuerda; la honra de salvacion y nuestra única esperanza, etc. Este
mos, ¿ porque nos advierte que debemos vivir lenguaje de los católicos es el de la mas grosera ido—
para el que murió por nosotros» (Contra Julian., l.6,
latria. Aunque pudiese pasar hablando de la cruz en
pág. 19). que Jesucristo fue enclavado, seria absurdo respecto
Los protestantes no se atreverian á negar que los de toda otra figura de la cruz; . .
cristianos del siglo IV rindieron un culto religioso á Respuesta. Si en materia de religion es un crimen
la cruz; pero dicen que esto era una nueva supers el lenguaje figurado y metafórico, es preciso empe
ticion. Pero habiéndoseles acusado de ella en el si zar condenando á Jesucristo, que quiere que un cris
lo II como en el IV, si los del siglo III la hubiesen tiano lleve su cruz; es necesario reformar á S. Pa
esechado defendiéndose de su acusacion, ¿se hubie blo, que no quiere que se haga ilusoria la cruz de
ran atrevido á adoptarla los del siglo siguiente? Ve— Jesucristo, que llama á su predicacion la palabra de
remos en el articulo siguiente que este culto se la cruz, que se glorifica en la cruz, etc. Cuando se
prueba tambien por la costumbre de los cristianos opone á los protestantes un pasaje de Orígenes (Com
de hacer la señal de la cruz. ment. in epist. ad Rom., l. 6, n. 1), en que ensalza
Estos mismos críticos dicen que los PP. comba el poder de la cruz de Jesucristo, responden que esle
tieron mal la ignominia que se queria hacer recaer Padre habla no de la cruz material, sino del pen
sobre los cristianos por el suplicio de Jesucristo. samiento, del recuerdo, de la meditacion de la muerte
S. Justino manifestó en el siglo II (Apol. 1, núm.55), de Jesucristo. De esta manera toman el lenguaje de
que la cruz del Salvador es el signo mas brillante de los PP. en sentido figurado cuando en él se encuen
su p0der y del imperio que ejerce sobre el mundo tran algunas ventajas, y en sentido literal cuando
enlero: recuerda las palabras de Isaias que ya habia les dá motivo para alguna acusacion; nos preguntan
citado, núm. 35, en donde el profeta, hablando del qué virtud puede tener una cruz de madera ó de me
Mesias, dice, que llevará la señal de su imperio sobre tal; á nuestra vez, les preguntamos qué virtud puede
sus hombros; esta es la cruz, dice S. Justino, que Je tener la señal de la cruz hecha sobre nosotros: si los
sucristo llevó antes de ser enclavado en ella. Hace calvinistas han perdido la costumbre de hacerla, los
observar, del mismo modo que Minucio Felix y Ter— luteranos al menos y los anglicanos la conservan, y
luliano, que este pretendido objeto de maldicion se ve, veremos despues que data de los tiempos apostólicos.
sin embargo, por todas partes en los mástiles de los Han disputado tambien mucho sobre la palabra
navíos, en los instrumentos de labor, en las insignias adoracion de que comunmente nos servimos respecto
militares, á las que los soldados dan un culto reli de la cruz; hemos demostrado ya que la equivocacion
gioso. de esta palabra y el abuso que se pueda hacer de
Por hallar algo que censurar, Le Clerc y Barbeyrac ella nada prueban. V. ADon ActoN.
suprimen la primera reflexion de S. Justino, dicien— Beausobre dice que el honor tributado á la cruz no
do que la segunda no es mas que una declamacion fue en un principio mas que un respeto esterior, co
pueril. Qué hay, pues, de ridículo en decir á los paga mo el que generalmente se tiene á las cosas santas, y
nos: si la cruz por sí es un objeto de horror, no de que desde el principio solo se honró la cruz en que
biérais permitirla en ninguna parte, sobre todo, en las Jesucristo fue enclavado, y despues este honor se hizo
imágenes de los dioses á quienes rendís culto? El hor estensivo á todas las imágenes de esta cruz; los mis
ror y el escándalo de los paganos, responde Barbey mos monumentos que nos hablan de la adoracion de
rac, no provenia de la figura de la cruz, sino de que la eruz mencionan tambien la adoracion de los san
era el instrumento del suplicio de los criminales y en tos lugares. (Hist. du Manich., l. 2, c. 6, S. 1, n. 6).
particular del de Jesucristo. Es cierto; y sin embargo, Sostenemos que si el respeto debido á las cosas
este instrumento de suplicio se veia en las insigniasmi santas no fuese mas que esterior, seria una burla y
litares con las figuras de los dioses. Por la cruz redi una hipocresía indigna de un hombre grave y sensato.
mió Jesucristo al género humano; con la predicacion Además preguntamos si el respeto dirigido á las cosas
e este misterio se convirtió y santificó el mundo, y los santas es un respeto puramente civil y que solo
lo habian predicho. S. Justino no insiste so tiene relacion con el órden civil de la sociedad. Es
re esta razon hablando á los gentiles, porque ha indudable que hace relacion al órden religioso; que
hria sido necesario esplicarles el misterio de la re es un acto de religion que tiene á Dios por objeto; que
dencion; pero esfuerza este argumento cuando dis apesar de los protestantes es un culto religioso, pues
Pula con el judio Trifon que era mas instruido (n. 9% to que culto y respeto son sinónimos. -

y sig; Tertuliano lo usa tambien (adv. judeos, c. 10 y La costumbre de poner cruces en los caminos pro
sig). Orígenes lo opuso mas de diez veces al filósofo viene de que les estaba concedido el derecho de asi
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lo, del mismo modo queálas iglesias y á los altares, en la religion de Mahoma; pero como son enemigos
Asi lo manda el concilio de Clermont celebrado el de la cruz, que es el signo del cristianismo, no quie—
año 1095, (canon 29.) ren un niño ni un esclavo que tenga impresa en la
CRUZ (SEÑAL DE LA). Es la accion de formar frente ó en el rostro esta señal. (Perpet. de la foi, t. 5,
una cruz sobre sí mismo, llevando la mano desde la l. 2, c. 1, p. 106).
frente al pecho y desde el hombro izquierdo al dere CRUZ (FIESTA DE LA). La Iglesia romana celebra
cho, pronunciando estas palabras: En el nombre del dos fiestas en honor de la santa Cruz; la primera
Padre y del Hijo y del Espiritu Santo. Estas palabras el 3 de mayo con el nombre de la Invencion ó el ha
las dijo el mismo Jesucristo cuando instituyó el bau llazgo de la santa Cruz: se instituyó en memoria de
tismo. (Mat., c. 28, y . 19) que Sa. Elena, madre del emperador Constantino,
Es uua breve profesion del cristianismo, cuya el año 326 hizo buscar y encontró bajo las ruinas del
costumbre contrajeron desde luego los primeros fie— calvario, la cruz en que Jesucristo fué enclavado.
les. «Para todas nuestras acciones, dice Tertulia Refiere este suceso S. Cirilo de Jerusalen que ocupó
no, cuando entramos ó salimos, cuando nos vesti la silla de esta Iglesia veinte y cinco años despues;
mos, cuando vamos al baño, á la mesa, á la cama, habla á sus oyentes como testigos oculares y en el
cuando tomamos una silla ó una luz, hacemos la se mismo lugar del suceso, (Catech. 10; S. Paulino, Epís
ñal de la cruz sobre nuestra frente. Estas prácticas tola 31; S. Gerónimo, Severo Sulpicio, S. Ambrosio,
no estan mandadas por una ley espresa de la Escri de obitu Theod.) Tambien hace mencion de esto San
tura; pero la tradicion las enseña, la costumbre las Juan Crisóstomo, Rufino y Teodoreto.
confirma y la fé las observa». (De corona, c...) Los Comparando sus narraciones procuraron ocultará
cristianos oponian este signo venerable á todas las los cristianos el conocimiento del sitio de la sepultura
supersticiones de los gentiles. de Jesucristo; no solo hacinaron en él un gran mon—
Orígenes dice lo mismo. (Select. in Ezech., c. 9.) ton de piedras y de escombros, sino que elevaron un
S. Cirilo de Jerusalen recomienda esta práctica á los templo á Venus y erigieron una estátua á Júpiter en
fieles, Catech.;. S. Basilio (lib. de Spiritu Santo, el mismo sitio en que se cumplió el misterio de la re
c. 27, n. 66), afirma que es una tradicion apostólica. surreccion. Sta. Elena, despues de haber hecho demo
Los PP. nos enseñan que la uncion del bautismo y la ler el templo mandó cavar por el lado del calvario, y
de la confirmacion se hacian en forma de cruz sobre por fin se descubrió la lumba del Salvador con los
la frente del bautizado; atestiguan que se obraban instrumentos de su pasion. Habiéndose encontrado
milagros por la señal de la cruz; que este poderoso tres cruces, fué reconocida la de Jesucristo por un
signo bastaba para auyentar los demonios y para inu milagro que obró. La emperatriz envió una parte á
tilizar todas sus astucias en las ceremonias mágicas Conslantino v otra á Roma, para colocarla en una
de los paganos. (Lactancio, l. , Divin. Instit., c. 27; iglesia que fundó en esta ciudad con el título de la
de Morte persec., c. 10, etc.) Santa Cruz de Jerusalen. Dejó la parte mayor en la
Puesto que la tradicion bastó para introducir este iglesia que hizo construir sobre el santo sepulcro, y
signo entre los primeros fieles; preguntamos á los pro que se liamó Basílica de la Santa Cruz, Iglesia del
testantes por qué no fue tambien suficiente para au - Sepulcro ó de la Resurreccion.
torizar el culto rendido á la cruz; qué diferencia hay Los protestantes prevenidos contra el culto de la
entre formar una cruz sobre nosotros por motivo de cruz han hecho la objecion de que Eusebio nada dice
religion, y tributar un respeto religioso á este mismo de este descubrimiento; pero ¿qué prueba este silen—
signo colocado ante nuestra vista. Ilé aquí lo que no cio contra la narracion de los testigos oculares contem
acertamos á concebir. -
poráneos, ó de autores coetáneos de este suceso? El
En el santo sacrificio de la misa, en la administra Padre Montfaucon nos dice que Eusebio hace mencion
cion de los sacramentos, en las bendiciones, en todo del hallazgo de la cruz en su Comentario sobre el
el culto esterior, repite la Iglesia sin cesar la señal de salmo 87, p. 59.
la cruz; esto es para enseñarnos que no pueden «Los milagros de Jesucristo, dice S. Cirilo de Jeru
producir efeclo algúno las prácticas y ceremonias, si salen, atestiguan su poder y su grandeza del mismo
no en virtud de los méritos y de la muerte de Jesu modo que el árbol de la cruz hallado en estos tiempos
cristo, y que todas las gracias de Dios nos vienen en entre nosotros, y del que los que lo han tomado con
consideracion á los padecimientos de este divino fé han llenado todo el mundo... Lo mismo sucede con
Salvador, y de la sangre que por nosotros derramó el sepulcro donde fué enterrado, y con la piedra que
sobre la cruz. en la actualidad está encima.» (Catec. 10). En la cuar
Es una costumbre muy generalizada entre los cof— ta y décima tercera catequesis dice, que los pedazos de
tos y demas cristianos orientales imprimir con un la cruz están esparcidos por todo el mundo. Los fie
hierro ardiendo la señal de la cruz sobre la frente de les que visitaban , los santos lugares todos deseaban
los niños ó sobre otra parte del rostro. Algunos auto verla. Aun cuando no tuviéramos mas testigo que
res mal informados han creido que los cristianos prac— este, no seria recusable; nació y hablaba en el mis
ticaban esta ceremonia por religion, y que estaban mo lugar, pudo haber visto el hecho que alestiguaba
rsuadidos de que podia reemplazar al baustismo; se y muchos de sus oyentes habian sido testigos co
an engañado. El abate Renaudot, mejor informado, mo él.
dice que nada de supersticioso tiene esta costumbre. A pesar de todo esto se atrevió á escribir Basnage
Trae su origen de que los mahometanos roban con en su Hist. de los Judios, l. 6, c. 1, sec. 10, que
frecuencia los hijos de los cristianos para hacerlos Gregorio de Tours, que murió el año 596, es el pri
esclavos y para educarlos, apesar de sus parientes, mero que habló de este hecho. Tan instruidos son lcs
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autores que los protestantes respetan como á oráculos. á la religion de los nuales reales ó supuestos de que
(Tillemont, t. 5.) En la vida de los PP. y de los fueron causa. Estas guerras, dicen, inspiradas por
Mártires en el 3 de mayo se encuentran curiosos por un celo religioso mal entendido, costaron á la Euro
menores sobre los diversos instrumentos de la pasion pa dos millones de hombres: vinieron á parar en lras
del Salvador. ladar al Asia sumas inmensas, en enriquecer al clero
La segunda fiesta de la santa Cruz es la de su escal y á los monjes, en arruinar á la nobleza, y en aumen
tacion el 1 de setiembre; su institucion es mas anti lar el poder de los papas y es cierto todo esto?
gua que la de la fiesta anterior, data desde el reinado Perecieron en ellas, si se quiere, dos millenes de
de Constantino. Se cree que se estableció el año 335, hombres libres, que oprimian á veinte millones de
bien en memoria de la cruz que milagrosamente se esclavos; inmensas sumas se llevaron al Asia, pero en
apareció á este emperador, bien para celebrar el des ella se aprendió el secreto de volverlas mayores á Eu
cubrimiento que su madre, Sla. Elena, hizo de la cruz ropa por el comercio: el clero y los monjes se enri
de Jesucristo. Los griegos, al menos, y los latinos la quecieron rescatando los bienes que les habian robado,
celebraban en el siglo V y V1, y la fijaron en el dia ¿ se habian quedado sin cultivar; , se arruinó la
de la dedicacion de la iglesia que Sta, Elena mandó nobleza, pero perdió sus hábitos de pillaje y de inde
construir sobre el Calvario. Todos los años el obispo pendencia. Si el poder de los papas se áuinentó por
de Jerusalen subia en este dia á una tribuna elevada, algun tiempo, se reprimió el de los mahomelanos,
y desde ella esponia la Santa Cruz á la veneracion todavia mas temible, y se evitó que pudiera embrute
del pueblo; de aqui el nombre de Eraltacion que se cerá la Europa entera. Pesando con reflecsion estas
dió á la fiesta. Los griegos, segun refiere Nicéforo, diferentes consideraciones, se verá de qué lado se
llamaban á esta ceremonia los misterios sagrados de inclina la balanza. Muchos escritores, que ninguna
Dios ó la santidad de Dios. intencion tenian de favorecer á la religion, han con—
Cosroes, rey de Persia, se apoderó de Jerusalen venido en los hechos que acabamos de esponer. Se
hácia el año 61 despues de vencer á los romanos; se gun su propia confesion, las cruzadas fueron, menos
llevó á Persia la sanla Cruz que estaba encerrada en efecto de un celo religioso, que de una desenfrenada
una urna de plata. Pero el año 628 el emperador He— pasion por las armas, y de la necesidad de una diver
raclio venció á su vez á Cosroes y le precisó á acep sion para suspender las agitaciones inlesliuas, que
tar las condiciones de la paz. Uno de los primeros ar duraban desde largo tiempo, y para acabar con las
tículos del tratado concluido con Siroes, su hijo, fué la guerras particulares que todos los dias se renovaban.
restitucion de esta preciosa reliquia. La volvió á traer Estos motivos estan terminantemente espresados en
Zacarias, patriarca de Jerusalen, que habia sido he— el discurso que el pontífice Urbano II dirijió á los se
cho prisionero, y el mismo Heraclio la colocó otra vez ñores franceses en el concilio de Clermon, en el año
en la iglesia del Calvario. Este suceso hizo mas cé 1095. «Es un crímen saquear á los cristianos como lo
lebre la fiesta de la Eraltacion de la Santa Cruz. haceis, pero es un mérito desenvainar la espada con
Los latinos establecieron una fiesta particular en el tra los sarracenos». Per esto el concilio prohibió rigu
siglo VIII el dia 3 de mayo, en memoria de la inven rosamente las guerras particulares, que múluamente
cion ó del descubrimiento de esta reliquia (V. Acta se hacian los señores, y puso bajo la proteccion de la
Sanctorum 3 de mayo. Tomasino, Tratado de las fes Iglesia las personas y los bienes los cruzados. His
tas, pág. 79; Vidas de los PP, y de los Mártires, 1% toria de la Iglesia Galicana, tom.8, lib. 22. año 1095.)
de setiembre, etc). Estas espediciones agotaron en Asia todos los furo
En cuanto á la milagrosa aparicion de la cruz, que res de celos y ambicion, toda la envidia y fanatismo
el emperador Constantino vió en el cielo. V. CoNs que circulaban en las venas de los europeos; pero in--
TANTlNO.
trodujeron entre estos el gusto del lujo asiático; in
CRUZ PECTORAL. Es una cruz de oro, plata ó demnizaron con un germen de comerció y de industria
piedras preciosas, que los obispos, arzobispos, los la sangre y poblacion que costaron; prepararon , el
abades regulares y las abadesas llevan colgada del descubrimiento de la América y la navegacion de las
cuello, y es una de las señales de su dignidad. Indias.
Su uso parece muy antiguo: Juan el diácono repre Los grandes vasallos de la corona, arruinados con
senta en su mausoleo á S. Gregorio con un relicario estos viajes, se hicieron menos turbulentos, y menos
pendiente del cuello, y llama á este ornamento fila dispuestos á rebelarse, y fue mas facil sacar de su po—
teria, quizá esto sea una corrupcion de la palabra der los dominios qne habian usurpado; la política se
philacteria. V. FILACTERos. El mismo S. Gregorio restableció con el poder de los reyes.
dice, esplicando esta palabra, que es una cruz enri Las primeras franquicias fueron concedidas á los
quecida con reliquias. Inocencio III dice que los papas esclavos por los señores que necesitaban dinero para
han querido imitar con esta eruz la lámina de oro que pasar el mar: la Europa, pues, debe tambien á las cru
llevaba sobre su frente el gran sacerdote de los judios. zadas los principios de su libertad.
Esta costumbre pasó de los papas á los obispos. En Desde entonces se empezaron á establecer manu—
cuanto á la cruz que se lleva delante de los arzobispos, facturas, se poblaron las ciudades, se aumentaron
V. CRUCERo y el antiguo sacramentario, pág. 153. sus recintos, se construyeron fuentes públicas. Nues
tros albañiles, ya arquitectos, ejecutaron por lo que
Cruzadas. Guerras emprendidas para conquis habían visto en Oriente esos monumentos atrevidos y
lar la lierra santa. En muchos escritos producidos ligeros, que todavia admiramos; y la Europa se llenó
¿ los filósofos se han censurado las cruzadas con de hospitales y hospitaleros.
astante acrimonia; han querido hacer responsable Parte del patrimonio de los nobles pasó á poder de
º,
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los eclesiásticos; pero estos hacian menos sombra á á los intereses civiles y políticos de la Europa; pero
la autoridad soberana que vasallos siempre dispuestos los incrédulos, ansiosos de encontrar una ocasion de
á tomar las armas. Muchas veces nuestros reyes, in deplorar los daños que la religion ha hecho al mun
quietados por señores rebeldes, pidieron ausilio á los do, copiaron servilmente las declamaciones de aque
obispos, y estos les grangearon el apoyo de los comu llos. Durante mucho tiempo ha mediado una especie
nes. Los reyes, por su parte, protegieron á los comunes de combate entre nuestros escritores, sobre cuál ha
contra la violencia de los señores y aumentaron el blaria peor de las cruzadas. Es de esperar que cuando
poder del clero que les era tan util. estos grandes políticos las hayan estudiado mejor sean
No es, pues, cierto que las cruzadas fuesen abso mas moderados.
lutamente funestas á la religion y á la sociedad. De Es indudable que diversas causas hicieron em
todos los males la ignorancia es el mas temible y el prender las cruzadas. 1.° La narracion que hizo Pe
que trae consigo todos los demas; ahora bien, las cru dro el Ermitaño y otros peregrinos de los males que
zadas contribuyeron en gran manera á disiparla. Si sufrian¿" parte de los turcos y sarracenos los cris
causaron un mal transitorio, tambien produjeron bie tianos de la Palestina, sobre todo aquellos que re
nes constantes. Las ciencias, las artes, el comercio, ducia por violencia á la esclavitud esta bárbara na
la industria y la civilizacion han hecho entre nosotros cion. 2.° La necesidad de detener el progreso de sus
mayores adelantos en los cuatrocientos años transcur conquistas y de debilitar una dominacion que ame
ridos desde las últimas cruzadas que en los ocho siglos nazaba á toda Europa; y para esto nohabia medio mas
que las precedieron. - eficaz que combatirla en su pais. 3." El deseo de es—
Solo copiamos aqui sucintamente las reflecsiones de tender el comercio y de bacerlo por sí mismos sin te
algunos escritores, dejando para los historiadores el ner que acudir á los estrangeros, que lucraban con
desenvolverlas completamente y darlas mayor fuerza. él sumas inmensas...º La miseria de los pueblos que
Esto es lo que ya hizo un sabio académico en una gemian bajo el despotismo feudal, y que se lisonjea
disertacion sobre este punto. Mem. de la Acad. de las ban con la perspectiva de mejor suerte fuera de su
Inscrip., t. 68, en 12, p. 29. Prueba que el interés patria. 5.º La curiosidad de ver paises de los que los
comercial de los europeos en Levante fue uno de los peregrinos referian tantas maravillas, y la ligereza
principales motivos de las cruzadas, y que tuvo en característica de los franceses que siempre los ha in
ellas mas parte que la religion ; que efectivamentn clinado á viajar. 6." La esperanza de hacer mas facil
contribuyeron estas espediciones eficazmente, no sole la peregrinacion de la Tierra Santa. Sin duda fueron
á los progresos del comercio marítimo y á las espedi estos tres últimos motivos los que impulsaron á los
ciones que fueron su consecuencia. sino al reconoci viajes de bltramar á esos rebaños de individuos de la
miento de las ciencias en Occidente y especialmente hez del pueblo de uno y otro secso que fueron á pere
en Francia. Desde el año 1285 quiso el Papa Hono cer alli; pero los tres primeros movieron sin disputa á
rio IV, con el objeto de convertir á los sarracenos los reyes, á los príncipes y á los militares.
cismáticos de Oriente, que se estableciesen en París Es pues inesacto decir que estas espediciones se
enseñanzas de árabe y de las demas lenguas orien emprendieron por supersticion y por un celo fanático
tales, conforme, dice, á las intenciones de sus prede de religion; si este motivo influyó en el pueblo, hubo
cesores. Clemente V mandó en el concilio general de otros mas poderosos que determinaron á los grandes.
Viena, celebrado en 1311 y 1312, que se establecie Tampoco es cierto que fuese injusto atacará una na
sen en Roma, París, Oxford, Bolonia y Salamanca cion solo porque era infiel; no se trataba de castigar
cátedras de hebreo, árabe y caldeo, con dos maestros su infidelidad, sino de enfrenar su ambicion y evitar
para cada una de estas lenguas; siendo pagados en su rapacidad y sus latrocinios; de quitarla el poder
Roma por el papa, en París por el rey, y en las de— de intentar conquistas en Italia y en Francia, é impe
mas ciudades por los prelados, monasterios y cabil dirla establecerse en estos puntos, como ya lo habia
dos del pais; mandando que tradujesen en latin las hecho en Córcega, en Cerdeña y en España. Seria
obras buenas que hubiese en estas lenguas. Esto dió injusto hoy atacar á los corsarios de Berberia para
lugar á la fundacion del colegio real y á la costumbre obligarles á renunciar á sus piraterias? Pero ni los
de enviar á Oriente misioneros, cuyas relaciones fre protestantes ni los incrédulos escucharán jamas la ra
cuentemente nos han sido muy útiles. zon; eternamente estarán repitiendo los mismos ab
Adiestrándonos en la marina, continúa el autor, surdos. Mosheim disertó ridículamente sobre este pun
nos acostumbraron las cruzadas á proyectar grandes to. Hist. de la Iglesia del siglo XI, 1.° parte, c. 1, S.
empresas marítimas y ocasionaron la invencion de la 8, etc. Siempre tendrá quien le copie y admire.
brújula; nos hicieron conocer lejanos paises sobre los
que nuestros antepasados solo recitaban fábulas; dis Cuadro. V. IMAGEN.
minuyeron en Francia el escesivo poder de los gran
des que vejaban á los pueblos. A ellas debemos el Cuálkero. Palabra inglesa que significa tem
gusto hácia las ciencias y á las artes, ó al menos cier blor; este es el nombre que dan en Inglaterra á una
to grado de perfeccion que adquirimos por el comer— secta de visionarios entusiastas, por el temblor y con
cio con Levante y con los árabes de España. No me torsiones que tienen en sus asambleas, cuando se creen
recian haber tenido imitadores los protestantes que inspirados por el Espíritu Santo.
han presentado estas espediciones como empresas ab n 1647, reinando Carlos I en medio de las re
surdas, injustas, desgraciadas sugeridas por la ambi vueltas y guerras civiles que conmovian este reino,
cion de los papas ó por un fanalismo insensato; que Jorge Fox, hombre rudo, de oficio zapatero, empezó
han dicho que fueron tan funestas á la religion como á predicar contra el clero anglicano, contra la guer
TOMO I. 77
 CUA 566) CUA
ra, contra los impuestos, contra el lujo, contra la mas puras que los ingleses en general. Su número
costumbre de jurar, etc. Facilmente encontró parti no obstante se disminuye diariamente; porque en ca
darios en un tiempo en que los ingleses, no teniendo lidad de no conformistas estan escluidos de los cargos
ninguna creencia fija sobre la religion , estaban en y dignidades, y porque el fanatismo se estingue poco
tregados á una especie de delirio y de fanalismo uni á poco cuando no está sotenido por la contradiccion.
versal. Los cuákeros, menos ignorantes que sus predeceso
Tomando en el sentido mas rigoroso todos los pre res y menos preocupados, comprenden por fin que
ceptos y consejos de la moral Evangélica, Fox sentó la virtud se hace ridícula por el desprecio de las co—
or primera mácsima que todos los hombres son igua modidades.
es por su naturaleza; y deduce que se debe tuleará El elogio de esta secta, que se ha insertado en
todos, á los reyes como á los carboneros; que se de la antigua Enciclopedia, fue copiado de las Cartas
ben suprimir todas las señales esteriores de respeto, filosóficas sobre los ingleses, cuyo autor es bien cono
como quitarse el sombrero , hacer cortesías, etc. cido; sabido es que en sus obras jamás se paga de
2.º Enseñó que Dios da á todos los hombres una luz la sinceridad, y que se ha propuesto siempre diver
interior suficiente para encaminarlos á la salvacion tir á sus lectores mas bien que instruilos. El autor
eterna; que de consiguiente no necesitan sacerdotes, de la historia del establecimiento de los europeos en las
ni pastores, ni ministros de la religion; que todo par Indias no ha hecho mas que repetir y ampliar las
ticular, tanto hombre como muger, está en estado mismas fábulas. Mosheim , , mejor informado y en
y con derecho de enseñar y predicar cuando es ins mejor posicion para juzgar del cuakerismo que estos
irado por Dios. 3.º Que para conseguir la salvacion frívolos escritores, ha hecho su historia, Hist. ecles.
asta evitar el pecado y hacer buenas obras; que no del siglo XVII, sec. 2.", lI parte, c. 3. Su traduc
son necesarios ni los sacramentos, ni las ceremonias, tor inglés añade muchas notas importantes. Para
ni el culto esterior. º Que la principal virtud del apoyar lo que dicen, cilan estos dos escritores los
cristiano es la templanza y la modestia; que se debe mismos libros de los cuákeros y los de testigos
evitar toda superfluidad esterior, los botones en los oculares; y son seguramente mas dignos de fé que
vestidos, las cintas y los ¿je las muge nuestros filósofos aventureros. Ahora bien, demues
tran:
res, etc. 5.º Que no es lícito jurar, pleitear, hacer la
guerra, empuñar las armas, etc. 1.º Que, apesar de los elogios pomposos que de
Una doctrina que ecsimia á los hombres de todo Jorge Fox y de Guillermo Penn han hecho sus par
deber esterior de religion, que autorizaba á los ig tidarios, estos dos hombres no eran modelos de sa—
norantes y á las mugeres á pasar por doctores, no biduría y de virtud. El primero era un fanático se
podia menos de ganar partidarios: Fox , aunque ig dicioso que nada respetaba, que ninguna ley obede
norante y visionario, tuvo prosélitos. Algunos ras— cia, que turbaba el órden y la tranquilidad pública
gos de moderacion que supo afectar, cuando fue cas y de consiguiente digno de castigo. Se ha querido ha—
tigado por sus estravagancias, acabaron de granjear cer creer que sufrió las penas con una paciencia he
le popularidad. róica; esto es falso. Sabido es que muchas veces lle
Uno de los primeros apóstoles del cuakerismo fue nó de ultrajes y de injurias á los magistrados que
Guillermo Penn, hijo único del vice-almirante de In querian reprimirle. Testigos, que conocieron personal
glaterra, Goven, que unia á su bella figura mucho mente á Guillermo Penn, dicen que era vano, ha—
talento y elocuencia natural, se juntó á Jorge Fox y blador, infatuado con su poder y su elocuencia y
redicó como él: hicieron juntos una mision en Ho muy poco instruido en materias de religion. Por
anda y en Alemaaia; pero solo pudieron ganar en nuestra parte añadimos que no está probado que fuese
Holanda algunos discípulos que han sido conocidos el único autor de las leyes de la Pensilvania, puesto
con el nombre de profetas ó profetizadores, y en Ale que tenia á su lado hombres instruidos capaces de
mania aun tuvieron peor écsito. -
ilustrarlo.
Despues de la muerte de su padre, Guillermo Penn, 2.” Que estos cuákeros que pintan como hom
heredero de todos sus bienes obtuvo en indemniza bres tan pacíficos y humildes, á quienes se atribuye
cion de lo que le debia el gobierno inglés, la pro la gloria de haber fijado el primer principio religioso
piedad de una provincia entera en América, que de de tolerancia universal, fueron sim embargo desde su
su nombre se llamó Pensilvania. Llevó á ella una origen, los fanáticos mas intolerantes y reveltosos que
colonia de discípulos suyos, fundó la ciudad de Fi jamas ha habido. «Recorrian, dice, Mosheim, como
ladelfia y la dió leyes. furiosos y basiliscos las ciudades y los pueblos decla
A pesar de la aversion que los cuákeros tienen á la mando contra el episcopado, contra el presbiterianis
guerra, se han visto sin embargo mas de una vez mo y contra todas las religiones establecidas. Ridicu—
precisados á tomar las armas contra los salvajes que lizaban el culto público, escarnecian á los sacerdotes
devastaban sus posesiones, y á perseguirlos como cnando celebraban, conculcaban las leyes y despre
bestias feroces. No se les acusa tampoco de haber ciaban á los magistrados bajo pretesto de estar inspi
rehusado tomar las armas en la última guerra de la rados, de este modo suscitaban grandes conmocio
independencia de América. Prueba de que los que nes en la Iglesia y en el Estado. No es pues de ad
hoy ecsisten no ecsageran tanto el fanatismo como mirar que el brazo secular se viese obligado á emplear
sus predecesores, y que se han visto obligados á ple su rigor contra estos fanáticos turbulentos, y que
garse á las circunstancias. muchos fuesen severamente castigados. Cromwel que
Convienen en Inglaterra, que los cuákeros observan toleraba todas las sectas, hubiera esterminado esta,
una esacta probidad, y que tienen las costumbres si hubiese creido conseguirlo».
 CUA 567 CUA
º

El traductoringlés confirma esta narracion con he las lecciones inmediatas de Jesucristo, cuando habla
chos incontestables, cita rasgos de impudencia y, de dentro de nosotros.
furor de las mugeres cuálteras, que escitan la indig 3.º, Que hasta los que no conocen el Evangelio
nacion. lloy estos sectarios y sus panegiristas pasan como los judios, los mahometanos, los indios y los
por alto estos hechos ó procuran paliarlos, pero nun— salvajes no estan por esto fuera del camino de salva
ca llegarán á borrar su recuerdo. cion, puesto que les basta escuchar al Maestro ó Cris
El ciudadano de Virginia, que acaba de publicar to interior que habla á su alma.
sus Investigaciones sobre los Estados— Unidos de Amé ...º Que el reino de Jesucristo se estiende á to
rica, apoya á Mosheim y á su traductor. Prueba con dos los hombres, porque pueden recibir interiormen
º memorias auténticas, que Guillermo Penn no se ocu te sus lecciones y conocer su voluntad; que no hay de
pó nunca mas que de sus intereses personales; que se consiguiente necesidad de ser cristiano esteriormente
ecsimió de los impuestos él y toda su descendencia; para salvarse. -

que empleó todos los recursos de su talento para en 5." Que debemos separar nuestra atencion de to
gañar á sus hermanos antes y despues de la emigra— dos los objetos esteriores que pueden afectar nuestros
cion; que les prohibió comprar las tierras de los in—
sentidos para dedicarnos únicamente á escuchar la
dios, á fin de monopolizarlas; que durante su per— palabra interior; que en su consecuencia se debe dis
manencia en Inglaterra, mantuvo la discordia en la minuir el dominio que el cuerpo ejerce sobre el alma,
Pensilvania por las instrucciones que enviaba á sus á fin de unirnos mas estrechamente á Dios.
6.º. Se sigue que una vez separadas nuestras al
lugartenientes, que lleno de locas y caprichosas ideas
¿ le ponian en una contínua necesidad de dinero, ymas de los cuerpos, no es creible que Dios quiera
lleno de deudas iba á venderá Jorge I la propiedad volverlas á encerrar en ellos por segunda vez; y que
del establecimiento, cuando murió en Lóndres de un asi se debe entender en un sentido figurado todo lo
ataque de apoplegía; que por último, se hizo culpa que dice la Escritura sobre la resurreccion futura; que
ble durante su vida de una multitud de injusticias y si Dios nos vuelve alguna vez un cuerpo, no será car—
de estorsiones. nal, sino espiritual y celestial.
Hace de los cuákeros en general un retrato que no 7." De consiguiente los cuákeros no se creen ab—
es mas satisfactorio. A su parecer el mérito principal solutamente obligados á enlender en un sentido real
de estos consiste en su economía y en su aplicacion á é histórico todo lo que dice el Evangelio en cuanto al
los negocios, y en materia de hipocresia nadie les nacimiento, las acciones, los padecimientos, la resur
iguala; pero en cuanto al comercio, no son sus virtu reccion de Cristo ó la encarnacion del Hijo de Dios;
des favorilas la delicadeza y la equidad. la mayor parte, sobre todo en América, toman todo
Es cierto, dice, que se encuentrán alguna vez entre esto en un sentido místico y figurado; segun es
ellos hombres de ríjida probidad, que desprecian la tos es solo una figura de lo que el Cristo interior
astucia y la hipocresía, pero son mas raros que en las hace para salvarnos; nace, vive, obra, padece, mue
demas sectas. Es facil engañarse por su esterior. Mu re y resucita espiritualmente con nosotros, etc. En
chas veces ha sucedido que su costumbre de contratar la misma Europa muchos, aunque con mas reser
reservadamente, apoyada en su religion, les ha dis va, hablan el mismo lenguaje, que es el de los anti
pensado de cumplir su palabra. guos gnósticos.
3." En esta secta, como en todas las demas, ha 8.º. Se deduce de lodo que no hay necesidad de
habido disputas y divisiones respecto de la doctrina. ningun culto esterior de religion, que basta dar al
Los de Pensilvania, en absoluta libertad, han exaje Cristo interior un culto puramente espiritual. Las ce
rado mucho mas sus opiniones que los de Inglaterra, remonias que afectan nuestros sentidos como el bau
porque estos siempre han estado contenidos por la tismo, la Eucaristía, la salmodia, las fiestas, etc., so
religion dominante y por el temor al gobierno. Ahora lo sirven para distraer nuestra atencion é impedirnos
bien, entre estas opiniones, las hay muy impías, y la atenderá las lecciones íntimas de la sabiduría divina.
religion de muchos de estos seclarios ha degenerado Puesto que habla á todas las almas, no se debe im
en un puro deismo. pedir á los hombres ni á las mugeres predicar en las
Mosheim, que ha estudiado á fondo su sistema, asambleas públicas cuando el espíritu de Dios los ins
lo espone de este modo: La doctrina fundamental de p l Td.
9.º La moral severa de los cuákeros nace igual -

los cuákeros, dice, es que hay en el alma de todos

los hombres una porcion de la razon y de la sabi mente del mismo principio. Siendo necesario dismi
duria divina; que basta consultarla y seguirla pa nuir el imperio del cuerpo sobre el alma, es preciso
ra salvarse. Llaman á esta pretendida sabiduria ce privarse de todo lo que solo sirve para alhagar, los
lestial, la palabra interna, el Cristo interior, la ope gustos sensuales, reducirse á lo absolutamente indis
racion del Espiritu Santo. pensable, moderar la aficion á los placeres con la ra
Resulta de esto: zon y la meditacion, no incurrir en ninguna especie
1.". Que la religion consiste en escuchar y se de lujo ni de esceso: lo cual motiva entre estos secla
guir las lecciones de esta palabra inierior, que en rios la gravedad de su esterior, la rústica, sencillez
el fondo no es otra cosa que el fanatismo de cada de sus vestidos, el tono afectado de su voz, la rudeza
particular. de su conversacion y la frugalidad de su mesa, Per
2. Que la Sagrada Escritura, que no es mas suadidos de que la mayor parte de los usos de la vida
que la palabra esterior, no nos indica el verdadero civil son una especie de lujo; de que las demostracio
camino de salvacion; y solo nos es util en cuanto nos nes de política son señales falsas, los cuákeros á nadie
escita á seguir la inspiracion interior, y á escuchar manifiestan respeto, ni con las fórmulas de la urba
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nidad ni con los movimientos del cuerpo; á nadie dan sus discípulos bautizar á todas las naciones, sinobau
título alguno de honor, á todos lutean sin escepcion. tizóá sus apóstoles violóá su propio precepto: dijo que
Rehusan empuñar las armas, jurar en juicio, compa el que no fuera butizado en el agua y en el Espíritu
recer ante ningun tribunal; prefieren renunciar á la Santo no entrará en el reino de los cielos.
defensa de sí mismos, de su reputacion y de sus bie Dice que los primeros fieles eran iguales como los
nes á acusar ó atacar á nadie. cuákeros han querido serlo. Esto es falso; los após
Mas en lnglaterra, enriquecidos los cuákeros con toles tenian autoridad sobre los simples fieles, y esta—
el comercio, y queriendo gozar de su fortuna, se re blecieron pastores á los que trasmitieron esta auto
concilian facilmente con las costumbres de la sociedad ridad y mandaron á los legos obedecerlos. Prescribie
y con los placeres mundanos. Dicen que han modifica ron tambien la sumision y la obediencia debida á los
do y reformado parte de las opiniones teológicas de príncipes, á los magistrados, á los hombres consti
sus antepasados, y procurado hacerlas mas razona tuidos en dignidad; los cuákeros les han negado to
bles. Mosheim nos advierte por último, que para for— da demostracion de respeto y frecuentemente los han
mar juicio sobre esta teologia, no debemos fiarnos en la insullado en su tribunal.
esposicion que hizo de ella Roberto Barclay en su ca Los primeros discípulos, continúa el autor, reci
tecismo y en la apologia del cuakerismo que publicó bieron el Espíritu Santo y hablaban en la asamblea;
en 1676. Este autor pasó en silencio una gran parte no tenian templos, altares, ornamentos, incienso, ci
de los errores de la secta, palió y desfiguró otros, rios ni ceremonias; Penn y los suyos los han imitado.
y empleó todas las astucias con que un abogado hábil Mas la inspiracion de los primeros cristianos estaba
procura hacer triunfar una mala causa. probada por los dones mílagrosos y sensibles de que
Esta historia de los cuákeros da materia para im iba acompañada: Cómo han probado la suya los pre
portantes reflexiones. tendidos prinitivos? S. Pablo cuidó de arreglar el uso
1." A nadie debe engañar la moral austera de de estos dones en las asambleas cristianas; prohibió á
que hacen alarde estos sectarios. Lo mismo ha suce las mugeres enseñar y hablar en ellas. Está probado
dido con corta diferencia á todas las sectas nacientes por el Apocalipsis, que desde el tiempo de los após
que todavia débiles necesitan compensar lo absurdo toles tenian los cristianos altares, ornamentos, incien
de sus dogmas con el rigor de su moral y la regula so, cirios y ceremonias. V. LuTURGIA.
ridad de su conducta; sin este recurso político, no Probamos tambien contra los protestantes y los in
hubieran subsistido largo tiempo. Lo mismo se puede crédulos que desde el origen de la lglesia cristiana se
decir de su tolerancia; solo recurrieron á ella despues han reconocido siete sacramentos.
de hacer todos los esfuerzos para destruir las otras No basta decirnos que los cuákeros siempre tuvie
sectas, de consiguiente cambiarian segunda vez de ron una bolsa comun para los pobres, y que en esto
principios y de conducta si su interés cambiase. imitaron á los discípulos del Salvador. Hay otro arti
2.º. El nacimiento del cuakerismo jamás honra culo no menos esencial que los primeros han observa
rá á los protestantes, puesto que nació del fanatismodo muy mal, á saber, la sumision al órden público.
con que la pretendida reforma embriagó todos los áni Los primeros cristianos nunca insultaron cara á ca
mos. Los apologistas de esta secta fundaron sus opi— ra á los magistrados; no fueron á perturbar las ce
niones en una esplicacion arbitraria de la Sagrada remonias de los paganos; no declamaron contra los
Escritura como los protestantes; no hay uno solo de sacerdotes ni conculcaron los ídolos; Fox y sus se
sus errores que no pueda apoyarse en algun pasage de cuaces cometieron todos estos desórdenes con la reli
ios libros sagrados ateniéndoseá este solo métodº, los gion anglicana. ¿En qué se parecen pues los unos á
protestantes lo mismo pueden refutar á los cuákeros los otros? Mas un autor que tan poco respetó la ver
que confundir á los socinianos. ¿En que se diferen dad al describrir los cuákeros, era incapaz de tener
cian la palabra interior de los cuákeros y el espiritu mas consideracion hablando de los primeros cris
privado de los protestantes? Los segundos del mismo tianos.
modo que los primeros han querido mejor hacer pro CUAKEROS FRANCESES. Hay cuákeros en las
sélitos con la violencia de sus declamaciones, que cercanias de Nimes. Originariamente esta pequeña
con la solidez de sus esplicaciones de la Sagrada És secta no tenia un sistema de culto bien determinado,
critura, sino solo una propension hácia el cuakerismo, cuyas
3.º. Es indudable que los incrédulos de nuestros mácsimas y usos fue progresivamente adoptando con
dias solo han defendido esta ridicula secta, porque han las visitas que le hicieron los cuákeros ingleses y
querido presentarla como una sociedad ¿? ¿ americanos. Antes que Luis XVI por su edicto de 1787
ambicionaban probar con este ejemplo que el deismo devolviese los derechos civiles á los protestantes, eran
es muy compatible con una moral escelente; querian secretas las asambleas de estos separatistas; despues
ademas hacer despreciable al cristianismo, denos— dejaron de cerrar sus puertas.
trando que lo que hay de escesivo en la moral de los Al principio de la revolucion rehusaron muchos
cuákeros no es mas que la misma letra del Evangelio; tomar las armas, hacian patrullas con los bastones;
pero la letra y el sentido no son una misma cosa. mas esto duró poco tiempo. Vieron con placer la abo
.." El paralelo que el autor de las Cuestiones sobre licion del culto esterior, la ofrenda de los vasos sa
la Enciclopedia, ha querido hacer entre los cuákeros ó grados y de los ornamentos de la Iglesia hecha por
pretendidos primitivos y los primeros cristianos es ab los clubs á las administraciones. Aunque menos ri
surda y solo está apoyada en falsedades, Dice que Je gorosos en sus costumbres que los cuákeros ingleses,
sucristo á nadie bautizó, y que los asociados de Penn su doctrina es la misma. Sus libros son la Biblia y
no quisieron ser bautizados. Pero Jesucristo mandó á algunas obras de la secta traducidas en francés, es
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pecialmente las de R. Borclay y de G. Penn. Sus ma ticos han entendido mal el pasaje de S. Ireneo, que es
trimonios se celebraban en la asamblea general. Los bastante oscuro.
de Inglaterra repugnan casarse fuera de su secta; Otros protestantes han dicho que fue el papa Teles
los cuákeros franceses, al contrario, se unen con los foro el que instituyó la cuaresma hácia la mitad del
protestantes y mas raramente con los católicos. Estos siglo II, que este ayuno al principio era voluntario,
matrimonios mistos resultan de su escaso número y que no llegó áser ley hasta mediados del Ill. Es lás
de su repugnancia á unirse entre los parientes muy lima que los PP. de aquellos tiempos hayan ignora
CCTCanOS. do esta anécdota. Cuando S. Telesforo ocupó la silla
de Roma, hacia treinta años poco mas que S. Juan
habia muerto; esto nos , aproxima, bastante al tiem
Cuaresma, cuadragésima. Ayuno de cuarenta po de los apóstoles. Pero, han pensado en ello los pro
dias observado por los cristianos para prepararse á testantes cuando han atribuido á un papa del siglo II
celebrar la festividad de la Pascua. el poder de introducir una nueva costumbre en la
Segun S. Gerónimo, S. Leon, S. Agustin y la ma Iglesia? Victor, uno de sus sucesores, sesenta años
yor parte de los PP. del IV y V siglo, la cuaresma despues, lo tenia mucho menos, puesto que una parte
fue instituida por los apóstoles. Raciocinan de este del Asia se le resistió con motivo de la celebracion
modo. Lo que se halla establecido en toda la Iglesia, de la Pascua.
sin que se vea su institucion en algun concilio , debe Aun cuando la institucion de la cuaresma no re
tenerse por obra de los apóstoles. S. Agustin, de Bapt., montase mas que hasta siglo II, era bastante antigua
contra Donat., l. , c. 2. Tal es, pues, el ayuno ¿ que los protestantes la debieran respetar, si hu
de la cuaresma; el canon 69 de los apóstoles, el con - querido perfeccionar las costumbres y no rela
cilio de Nicea, celebrado en 325, y el de Laodicea del Antiguamente en la lglesia latina el ayuno no era
J d'aS.
año 365, los PP. griegos y latinos del II y IIl siglo
hablan de él como de un uso observado en toda la mas que de 36 dias; en el siglo V, para imitar mas
Iglesia. exactamente el ayuno de cuarenta dias observado
Han pretendido los protestantes que el ayuno de la por Nuestro Señor, añadieron algunos cuatro dias, y
cuaresma al principio habia sido instituido por una este uso se ha seguido en Occidente, escepto en la
especie de supersticion y por hombres sencillos que Iglesia de Milan.
quisieron imitar el ayuno de Jesucristo; que despues Los griegos empiezan la cuaresma una semana an—
se estableció insensiblemente esta costumbre y llegó tes que nosotros; pero no ayunan los sábados, escep
á ser casi general. Chemnitius, Daillé y un inglés lla tuando el sábado santo. -

mado Hooper han disertado largamente contra esta
institucion , y nada han omitido para hacer su origen
sospechoso. Pero los ha refutado sabiamente en todos
sus puntos Beveridge, obispo de S. Asaph, teólogo
inglés, en sus Notas sobre los cánones de los apóstoles,
l. 3. Véase Pi”. Apost., t. 2, 2." parte, p. 13% y
siguientes.
Mosheim se ha visto obligado á convenir en que
las pruebas y los razonamientos de este autor son
fuertísimos. Despues de semejante confesion no es á
propósito el pretender, como Daillé, que la duracion
y la forma del ayuno de la cuaresma no han sido de
terminadas hasta el siglo IV, puesto que Beveridge,
Los antiguos monges latinos hacian tres cuaresmas;
la principal antes de Pascua, otra antes de Natividad
(la llamaban la cuaresma de S. Martin) y la tercera,
de S., Juan Bautista, despues de Pentecostes; todas
tres de cuarenta dias.
Ademas de la de Pascua observan los griegos otras
cuatro, que llamaban de los apóstoles, de la Asun
con, de Natividad y de la Transfiguracion; pero las
reducian á siete dias cada una. Losjacobitas guardan
la quinta, que llaman de la penitencia de Nínive, y
los maronitas la sesta, que es la de la Exaltacion de
la Santa Cruz. Siempre han sido grandes ayunadores
los orientales. -

ha demostrado que, segun el concilio de Nicea, cele—
-bado el año 325, la cuaresma era una práctica co—
nocida ya y observada en toda la cristiandad.
Su argumento mas fuerte es un pasaje de S. Ire
neo, citado por Eusebio, l. 5, c. 2%, que dice que en
su tiempo, es decir, á fines del siglo II, unos creian
El VIII concilio de Toledo del año 653 mandó que
aquellos que sin necesidad hubieran comido de carne
en la cuaresma no comiesen de ella en todo el año y
no comulgasen en la Pascua. A los que la vejez ó en
fermedad obligasen á comer, no lo harán sino con
permiso del obispo. Can 8. a

¿ debian ayunar un dia, otros dos, estos muchos Insensiblemente se relajó la disciplina de la lglesia en
ias, aquellos cuarenta. Luego, dicen, no habia en cuanto el rigor de la cuaresma. En los primeros tiem
tonces todavia nada constante y uniforme sobre este pos, el ayuno, aun en Occidente, consistia en abste
punto de disciplina. Mas, como observa Beveridge, nerse de la carne, de los huevos, leche, vino, y en no
S. Ireneo no para aqui; añade que esto ha provenido hacer mas que una comida despues de vísperas ó há
de que algunos antiguos no fueron esactos en retener cia la tarde; esta costumbre ha durado hasta el
la forma del ayuno, y han dejado pasar como cos año 1200. Pero antes del año 800 ya se permitia el
tumbre lo que era efecto de sencillez y de ignoran uso del vino, de los huevos y de la leche. Algunos
cia. Ibid., p. 156 y 157. Y cuál era la forma del glotones pretendieron que las aves no eran un man
ayuno en el siglo ll? Origenes, que vivió cincuenta prohibido y quisieron comerlas; re reprimió este
años despues que S. Ireneo, nos dice que era de cua d DllS0,
renta dias. Hom. 10 in Levit., n. 2. Era, pues, por En la Iglesia de Oriente ha sido siempre muy rigo
sencillez y por ignorancia que algunos no la observa roso el ayuno; durante la cuaresma la mayor parte
sen asi. Beveridge deduce que M. Valois y demas crí de los cristianos vivian de pan y agua, de frutas se
 -r
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cas y legumbres. Los # comian al medio dia y Cuarenta horas. Las oraciones de las cua
hacían colacion de yerbas y frutas verdes por la no renta horas son una devocion general en la Iglesia
che, desde el siglo VI. Los latinos empezaron en el XIII romana, consiste en esponer el Smo. Sacramento á
á lomar algunas conservas para sostener el estómago, la adoracion de los fieles durante tres dias seguidos
y despues de hacer colacion por la noche. Este nom y durante trece ó catorce horas en cada uno. Estas
bre ha sido tomado de los religiosos, los que despues oraciones van acompañadas regularmente de sermo
de comer oian la lectura de las conferencias de los nes, de bendiciones, etc. Se hacen durante el jubileo,
santos PP., llamadas en latin collationes; despues queen las calamidades públicas, el domingo de Quinqua
se les permitió beber agua y un poco de vino los dias gésima y los dos dias siguientes, etc.
de ayuno, á este pequeño refrigerio se llamó tambien
colacion. Cuatuordecimanos. V. PAscUas.
Sin embargo, no se verificó de repente la comida
al medio dia en los dias de ayuno. El primer grado Cuasimodo. Se llama asi el domingo de la oc
de este cambio fue anticipar la comida á la hora de tava de pascuas porque el introito de la misa de este
nona, es decir, tres horas despues del medio dia. En dia empieza por estas palabras: Quasimodo geniti
tonces se rezaba la nona, luego la misa y las vísperas infantes. Se tambien dominica in albis, por
despues que se iba á comer. Hácia el año 1500 se ade ue los que habian recibido el bautismo en la Pascua
lantaron las vísperas al medio dia y se creyó observar iban el dia de la oclava á dejar en ceremonia en la
la abstinencia prescrita no usando de carne durante sacristia de la Iglesia las vestiduras blancas con que
los cuarenta dias y reduciéndose á dos comidas, una habian sido adornados en su bautismo. Los griegos la
mas abundante y otra mas escasa por la noche. han llamado tambien dominica nova, por razon de la
llan observado nuestros historiadores que durante vida nueva que los bautizados debian empezar á te
la invasion que hicieron en Francia los igleses el ner desde este momento.
año 1360, su ejército y las tropas francesas observa. Sabemos que en los primeros siglos todos los dias
ban la abstinencia y el ayuno de la cuaresma. Frois de la quincena de Pascua eran considerados comó dias
sart, l. 2, c. 210. de fiesta; asi lo habian ordenado los prelados de la
En el principio se unia al ayuno de la cuaresma la Iglesia en muchos concilios y los emperadores habian
continencia, la abstinencia de los juegos, de las di confirmado esta disciplina. Vemos por los sermones
versiones y de los pleitos. No está permitido oasarse de S. Juan Crisóstomo y de S. Agustin que todos
en la cuaresma sin una dispensa del obispo. Tomasi estos dias eran empleados por los fieles en celebrar
no, Trat... hist. y pol. del ayuno. el oficio divino, en oir la palabra de Dios, recibir la
Los epicúreos modernos han disertado con su celo sagrada Eucaristia y hacer buenas obras. Bingham,
ordinario contra la abstinencia y el ayuno de la cua orig. ecles., l. 20, c. 5. S. 12, t. 9, p. 118.
resma, han querido aparentar un motivo de bien pú -
blico. Dicen que en Paris el pescado es caro, malo y Cuatro témporas. Ayuno que se observa en
de poca sustancia, y que el pueblo precisado á tra la Iglesia al principio de las cuatro estaciones del año
bajar no está en estado de guardar abstinencia y se hace tres dias de una semana el miércoles, viernes,
ayunar. y sábado.
Mas en los siglos pasados ¿el pescado era mas ba Es cierto que este ayuno estaba ya establecido en
rato ó mejor que en el dia, ó el pueblo estaba menos el tiempo de S. Leon, pueslo que en sus sermones
sujeto al trabajo? Los políticos de aquellos tiempos no distingue claramente los ayunos de las cuatro esta
creyeron que era necesario abolir la cuaresma. Ellos ciones del año y que se observaban durante tres dias
mismos la guardaban y les parecia bien que nadie á saber, el de la primavera á principio de cuaresma,
se dispensase de ello. Los que en el dia quebrantan la el del estío en Pentecostes, el del otoño en el 7." mes
ley, querrian que lodos siguiesen su ejemplo, á fin de ó en setiembre, y el del invierno en el décimo mes ó
que se note menos su fealdad. en diciembre. Pero este santo pontífice no habla de
Los precios de los víveres en Paris no es la regla los ayunos como de una cosa nueva, al contrario los
del universo enlero. En las provincias comen los po considera como una tradicion apostólica. Estaba per
bres raras veces la carne, el pueblo vive con leche y suadido de que era una imilacion de los ayunos de
con legumbres, y por eso no está peor. No es él, el que la sinagoga, pero no hay ninguna prueba de que los
se queja de la cuaresma, son los ricos cansados de la judios hayan hecho tres dias de ayuno al principio de
suntuosidad de su mesa. Si á la práctica del ayuno cada estacion; Sto. Tomás no es de este parecer: se
añadiesen la de la limosna como manda la Iglesia, los podria quizá conjeturar con mas razon que las cua
pobres vivirian mejor y mas cómodamente en la cuo tro témporas se instituyeron por oposicion á las locu
resma, que en el resto del año; bendicirianá Dios por ras y desórdenes de las bacanales, que renovaban los
esta institucion saludable. paganos cuatro veces al año.
La Iglesia anglicana ha conservado la cuaresma, no Sea de esto lo que quiera, no podemos dudar que
por un motivo de política ni por un interes de comer— este ayuno haya tenido por objeto el consagrar á Dios
cio, como han pensado algunos especuladores, sino por la penitencia y mortificacion las cualro esta
porque es una institucion de los apóstoles lan antigua ciones del año, como dice S. Leon, y para alcanzar
como el cristianismo. V. la Hist. de las variac., l. 7, de Dios su bendicion sobre los frutos de la tierra. Se
número 90; á Beveridge en el lugar que hemos citado; añadió á él un nuevo motivo, cuando se puso en prác
á Tomasino, Tratado del ayuno, etc. lica el hacer en este tiempo la ordenacion de los mi
nistros de la Iglesia, y esta es una disposicion que
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data al menos del siglo V, puesto que se habla de mortal nos hace dignos de la condenacion, Dios puede
ella en la carta 9.” del papa Gelasio. Se juzgó conve sin duda remitirnos esta pena eterna, sin dispensar
uiente que todos los fieles pidiesen con la oracion y nos de sufrir una pena temporal y pasajera; vemos
con el ayuno las luces del Espíritu Santo para esta el ejemplo de esto en David, y en la mayor parte de
importante accion, á fin de imitar de este modo la aquellos á quienes Dios ha hecho pagar en este mun
conducta de los apóstoles. Act., c. 13, y. 3. do la pena de su pecado.
No debemos admirarnos de que no se observasen CULPA. Se dice tambien en los monasterios para
las cuatro témporas en la Iglesia griega, puesto que significar la confesion que se hace de sus faltas en el
los griegos aynnaban todos los miércoles y los vier capítulo reunido.
nes del año y celebraban el sábado. Aun en el Occi
dente no era practicado universalmente este ayuno Culto. Honor que se tributa á Dios ó á otros sé—
en todas las iglesias; tampoco lo era en las de España res en consideracion á él y por respeto á él. Es im
en tiempo de S. Isidoro de Sevilla, en el V1, y no posible admitir en Dios una providencia, sin deducir
se puede probar que lo haya sido en Francia antes del que es justo y necesario tributarle culto, no porque
reinado de Carlo Magno. Pero este príncipe mandó su tenga necesidad de él, sino porque nosotros tenemos
observancia por una capitular del año 769, y lo hizo necesidad de ser reconocidos, respetuosos y obedien
confirmar por un concilio de Maguncia del año 813. tes á nuestro Criador: el que no lo es con Dios, lo es
Por último en el siglo XI el papa S. Gregorio VII fijó menos con los hombres.
con distincion las cuatro semanas en las que debian Respetar su Magestad Suprema, conocer su presen
observarse las cuatro témporas, é insensiblemente cia en todas partes, reconocer sus beneficios, creer
esta disciplina se estableció con uniformidad, tal en su palabra, someterse á sus órdenes y á su vo
como se halla en el dia. Tom sino, Tratado de los luntad, confiar en sus promesas y en su bondad,
ayunos, 1.º parte, cap. 21; 2.” parte, cap. 18, amarle sobre todas las cosas; hé aquí los sentimien
tos en que consiste el culto en espíritu y en vcrdad;
«Juerda Cordel. Siempre se han valido de reunidos todos forman lo que llamamos adoracion ó
una cuerda para medir el terreno; por esto en la Es— culto supremo , que solo se debe y solo se puede tri
critura cordel significa muchas veces una porcion de butar á Dios. V. RELIGIoN. -

lierra, una comarca. Deut., c. 3, y . ; Heb. el cor— Conviene esplicar las palabras antes de entrar en
del de Argob es el pais de Argob. Consiguientemente ninguna cuestión sobre este punto. En todos los idio
designa tambien la porcion de terreno que le ha to— mas culto, honor, respeto, veneracion, reverencia,
cado á alguno en herencia. Deut., c. 32, y. 9, se servicio, son sinónimos, sobre todo en el lenguaje co
dice que la descendencia de Jacob es el cordel óla mun y popular. En la misma, Sagrada Escritura, la
porcion de herencia del Señor. El Salmista dice, palabra hebrea, que denota el culto supremo dado á
Ps. 15. y. 6, mi cordel, mi porcion ha caido en un Dios, significa tambien el honor que los patriarcas
escelente terreno. tributaban alguna vez á los ángeles, y que concedian
CORDEL. Significa tambien los cordeletes con que á los hombres: en estos diferentes pasajes, las ver
se alaban los miembros de los muertos para embal— siones emplean indiferentemente la palabra adorar ó
samarlos. II Reg,, c. 22, y . 6, he sido rodeado de las prosternarse. No obstante, la palabra y la accion no
cuerdas del sepulcro. Por último significa una tram pueden significar el mismo sentimiento ni el mismo
pa, un lazo. Ps.118, y. 61, las cuerdas de los peca grado de respeto, con relacion á objetos tan diferen
dores me han rodeado. tes; es necesario, pues, que la significacion de las pa
labras cambie segun las circunstancias y segun la in
Cuerpo de Jesucristo. Ilácia principios del tencion de los escritores.
siglo XIV apareció una órden llamada religiosos del De consiguiente es forzoso distinguir diversas es—
cuerpo de Jesucristo, ó religiosos blancos del Santísimo pecies de culto, y conviene tomar su idea de la Escri
Sacramento, ó hermanos del oficio del Santísimo Sa— tura Sagrada. Los teólogos heterodoxos han hecho
cramento, que seguian la regla de S. Benito. No es muchos argumentos y reflexiones falsas sobre este
conocido su fundador. Se presume que, despues de la punto por carecer de nociones justas y exactas sobre
institucion de la festividad dcl Santísimo Sacramento él: ningun artículo hay en la doctrina católica que
por Urbano IV en 1262, algunas personas devotas mas hayan procurado desfigurar.
se asociaron para adorar particularmente á Jesucris Llamamos culto interior á los sentimientos de esti
to presente en el Santísimo Sacramento, y recitar el macion, admiracion, de reconocimiento, de confian
oficio compuesto por Sto. Tomás de Aquino, y que za y de sumision respecto de un ser que juzgamos
este fue el origen de los religiosos de que hablamos. digno de ellos; y culto esterior las señales cstensibles
En 1393 Bonifacio IX los unió á la Orden del Cister; con que atestiguamos estos sentimientos, como las
despues se separaron de ella; por último Gregorio XIII genuflexiones, reverencias, las oraciones, los votos,
unió esta congregacion á la del Monte-Olivete. las ofrendas, etc. Cuando estas demostraciones no
van acompañadas de los sentimientos del corazon, no
Culpa. Palabra derivada del latin culpa, falta, hay culto verdadero y sincero, sino hipocresía; vicio
pecado. Los teólogos distinguen en el pecado la culpa, que mas de una vez reprendieron á los judios Jesu
de la pena. La creencia católica es que el sacramento cristo y los profetas.
de la Penitencia remite al pecador la culpa y la pena Como el culto cambia de naturaleza segun los di
eterna, pero no la pena temporal; que la caridad per versos motivos que se inspiran, es preciso distinguir
fecta y ardiente remite las dos. Como el pecado el culto cicil del culto religioso. El culto puramente
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civil cuando honramos en un personage cualidades, como relativo; los honores que se tributan al rey son
un poder, una autoridad, que solo tienen relacion con un culto civil absoluto, el respeto que se tiene á su re
el orden civil y temporal de la sociedad; y culto reli trato y á su embajador es relativo; no se les honra
gioso cuando honramos en él un poder, una dignidad, por ellos mismos sino en consideracion al rey. Se di
un mérito sobrenatural, ventajas que solo tienen re ce en el Salmo 98. Heb., 99, y.5 y 9. «Adorad el
lacion en orden á la gracia y á la salvacion eterna, escahel de los pies del Señor porque es santo. Adorad
puesto que solo la religion nos puede hacer conocer y su monte sanlo». Cuando los ¿ se prosternaban
estimar los dones de la gracia. Pero nos es imposible ante el arca de la alianza, ante el templo, ante el mon
espresar el culto religioso con otras señales que el culto te Sion, cuando se volvian de este lado para orar, no
civil; la diversidad de objeto es lo que constituye la pretendian adorar el arca, el templo, ni el monte, si
diferencia. no á Dios que se creia alli presente; luego cuando ha
De manera que el culto no puede ser el mismo cemos lo mismo ante una imagen del Salvador, ó ante
cuando son diferentes las ideas que tenemos de las su cruz, no se dirige nuestro culto á estos símbolos,
personas ó de los objetos á que le dirijimos. Como sino al mismo Jesucristo: dijo á sus discípulos: «El que
únicamente en Dios reconocemos toda perfeccion, los os recibe, me recibe, el que os oye, á mi me oye, el
atributos del Criador y de único Señor soberano, le ue os desprecia, me desprecia» (Mat., c. 10, y, 0;
damos sentimientos de admiracion, de respeto, de re uc., c. 10, y . 16); no es, pues, cierto que en materia
conocimiento, de confianza, de amor, de sumision, de culto religioso sea uua invencion moderna de los
que no podemos tener hácia ninguna criatura: por teólogos la distincion que hacemos de culto absoluto y
eso le tributamos, no solo un culto religioso, sino un culto relativo, que no está apoyada en la sagrada Es
culto supremo que llamamos propiamente adoracion; critura, como pretenden los protestantes.
rº é impiedad querer dar este culto á otro Con el ausilio de estas nociones, que nos parecer:
Cuando
q tl6 a el. respetamos y honramos en los ángeles y claras facilmente podremos resolver, las cuestiones
-

que comunmente se proponen en cuanto al culto en

en los santos las gracias sobrenaturales con que Dios general. 1." Es permitido tributar un eulto religioso á
los ha enriquecido, la dignidad á que los ¿ , el otros seres ademas de Dios? 2." ¿Consiste solo la re
poder que les concede, no les damos un eulto divino, ligion en el culto interior? No es absolutamente nece—
ni un culto supremo, sino un culto inferior y subordi sario manifestar este culto en lo esterior? 3." ¿Es un
nado; es sin embargo un culto religioso, puesto que abuso la pompa en el culto divino?..." ¿Qué se debe
tiene por objeto la religion, ó el respeto que tenemos
al mismo Dios.
pier por culto supersticioso, indebido y supér
t) 0? -

Cuando Dios dijo á los Israelitas (Erod., c. 23, I. Dicen los protestantes que todo culto religioso
y. 21): «Respetad mi ángel, porque en él está mi dado á otros seres ademas de Dios es una impiedad
nombre, » no les prescribió un culto civil. Cuando la y una idolatria; es uno de los principales motivos
muger de Samária se prosternó ante Eliseo, porque que alegaron para justificar su separacion de la Igle
este profeta acababa de resucitar á su hijo, no pre sia romana. Dios, dicen, se ha esplicado en este pun
tendía honrar en él, una dignidad, ni un poder ci— to con claridad (Deut., c. 6, y. 13). «Temereis al Se
vil, sino la cualidad de profeta santo, de hombre de ñor vuestro Dios, y á él solo servireis», Jesucristo re
Dios, y el poder de hacer milagros. (IV Reg.. c., y. 9 pitió estas palabras en el Evangelio Mat., c., y. 10.
y 37). En el orden civil se puede llamar culto supre La ley es clara y sin replica. -

mo el que se tributa al rey, y culto inferior el que se Respondemos que esta ley prohibe dará otros se
dá á sus ministros. Porqué no ha de tener lugar esta res fuera de Dios el culto supremo, el culto que ates
denominacion respecto del culto religioso? tigua su calidad de único Soberano Señor, pero que
Para aclarar mas el lenguaje, llaman los teólogos no prohibe dará otros el culto inferior y subordinado,
latria al culto dado á Dios, y dulia al tributado á los que supone que son criaturas dependientes de Dios,
santos; pero ambas palabras, derivadas del griego, puesto que este culto, lejos de quitar á Dios su título
significan en su orígen igualmente servicio sin dife de Señor Soberano, al contrario lo confirma. Proba -
rencia alguna. . mos que este es el sentido de la ley. 1.” Porque el
Aun necesitamos recordar que empleamos muchas mismo Dios dijo á los judios (Ecod., c. 23, y 21).
veces las mismas demostraciones esteriores para sig «Enviaré mi ángel que os precederá... respetadle,
nificar un culto esterior, que para atestiguar un culto observa eum, no le desprecieis porque mi nombre está
supremo; y entonces solo la intencion determina la en él.» Es pues falso que Dios ha prohibido cualquier
significacion de los signos. Del mismo modo se acos otro culto dirígido á ótros seres fuera de él., 2.” Por
tumbra á inclinarse, á descubrirse, á arrodillarse, á que vemos á los patriarcas, á los jueces y á los profe
prosternarse delante de los grandes que delante del tas prosternarse ante los ángeles, y rendirles el mas
rey, sin que por esto se pretenda darles igual honor: profundo respeto. Abraham se postró ante tres ángeles
esto sucede igualmente con el culto religioso respecto que recibió en su casa; Balaam hizo lo mismo ante el
de Dios, y respecto tambien de los ángeles y de los ángel que se le apareció; Josué ante otro; Daniel ante
santos. Casi toda la diferencia consiste en la forma de el que vino á revelarle el porvenir. El ángel que se
las oraciones; pedimos á Dios que por sí mismo nos llama príncipe del ejército del Señor dijo á Josué.
conceda sus gracias, y suplicamos á los santos que «Descalzaos, el lugar en que estais es santo» (Josué
interpongan su intercesion para obtenerlas para nos— c. 3, y. 1); y siguienles: penetrado Josue de respeto
otros: esto es muv diferente. se prosternó, y le dijo: «qué manda mi señor á su
El culto, ya civió religioso, tan pronto es absoluto servidor?» ¿Violó por esto Josué la ley? En vano dirán
 CUL
los protestantes que esto no era mas que un culto civil;
hemos ya dea ostrado lo contrario con la sencilla no
cion de las palabras.
Pretenden que en estas diversas circunstancias
fue el Hijo de Dios el que se apareció á los antiguos
justos: podrá ser verdad; pero estos justos lo sabian?
Dios no se lo habia prevenido y sus ángeles no lo de
cian; al contrario, Dios que prometió á los israelitas
que su angel les precederia (Erod., c. 23, y . 21),
prometió despues á Moisés que él mismo les prece—
deria, (c. 33, y. 17, luego habia alguna diferencia
entre Dios y su angel. El que se llama principe del
ejército del Señor no se atribuye la divinidad. 3.º
Añadimos que es imposible respetar sinceramente á
Dios, sin honrar á unos seres que ha llamado sus ami
gos, sus santos, sus elegidos.
Sostenemos tambien que la ley del Deuteronomio al Hijo como se honra al Padre. Beausobre juzga que
no prohibe respelar las cosas inanimadas, cuando se ha podido dar á las criaturas el nombre de Dios sin
son símbolos de la presencia de Dios; tales eran la
nube de fuego desde la que Dios habló á Moisés, el
arca de la alianza, el tabernáculo y el templo; por
el contrario, Dios dice á los israelitas (Lev., c. 26,
y. 2): «Estad poseidos de terror ante mi santuario»,
y les manda respetar como santo todo lo que sirve
para su culto. David dice (Salmo 98, y. 5: «Alabad
al Señor nuestro Dios, adorad el escabel de sus pies,
porque es una cosa santa». Es absurdo objetarnos
una ó dos leyes, y no tener en cuenta todas las
demas.
Asi nada hay mas falso que la nocion que quiso
dar Beausobre del culto religioso, cuando dijo, que es
el que hace parte del honor que se tributa á Dios
(Hist. del maniq., lib. 9, c. 5, S. y siguientes). Con
el objeto de persuadir que no hay mas culto religioso
que el que se debe á Dios, y al decidir que las mismas
ceremonias que se practican inocentemente en el
culto civil, respecto de una criatura, no son permiti
das para tributará aquel un culto religioso, ha con—
tradicho terminantemente la Escritura Sagrada.
Era aun acto de idolatria, dice, besarse la mano
mirando al sol é inclinándose ante él (Job., c. 31,
y.26); sin embargo, ¿? no lo miraban mas
que como un ser dependiente y un instrumento del
supremo Dios. Esta observaciones tambien falsa. Ja—
mas conocieron los paganos un Dios creador, supre
mo, y señor del sol; juzgábanle animado, inteligen
te, poderoso por sí mismo, y de consiguiente un Dios
muy independiente del Dios supremo; asi lo veremos
despues.
Conviene en que los maniqueos daban un honor
directo al sol y á la luna, puesto que los considera—
ban como templos en que Jesucrísto residia por sus
dos atributos de virtud y de sabiduría; pero los ab
suelve de idolatria, porque no daban á estos dos as
tros la adoracion suprema que solo pertenece á Dios.
Alega una cita del maniqueo Fausto que dice: tenemos
á estas cosas la misma veneracion que vosotros pro
fesais al pan y al caliz. Ahora bien, los católicos, di
ce Beausobre, solo tienen al pan y al caliz un respeto
religioso, porque son las figuras del cuerpo y la san
gre de Jesucristo.
Admitimos por un momento esta falsa razon. De
ella se sigue: 1.” que no es cierto que todo culto ó to— gativas, y para darles mayor fuerza, añade de su
- - - - - - -
do respeto religioso dirigido á otro ser distinto de cosecha: «Los antiguos solo exhortaban á los fieles á
573 CUL
Dios sea idolatria, como sostienen los protestantes.
2." Que si se puede acusará los PP. de inconsecuentes
cuando condenan el culto de los maniqueos, y aprne
ban el de los católicos, Beausobre cae en la misma in
consecuencia condenando la idolatria y el culto de los
católicos, al paso que justifica el de los maniqueos.
3.° La decision respecto de estos últimos es espresa
mente contraria al pasaje de Job, que él citó.
No es de estrañar que con estas falsas nociones
acerca del culto religioso nunca hayan podido ponerse
de acuerdo nuestros adversarios. El calvinista Daillé
sostiene que todo culto religioso que no se dirige di
recta y únicamente á Dios, es una idolatria ó al menos
una supersticion. Los socinianos pretenden, por el
contrario, que se puede adorará Jesucristo como Dios,
aun cuando no lo sea, porque dijo que se debe honrar
idolatria; pero que no se puede, sin caer en este cri .
men, darles ¿ que se debe á Dios solo, como
si se les pudiera hacer mayor honra que llamarlas
dioses. El anglicano Hyde vitupera á los cristianos
de la Persia porque preferian la muerte á la adora —
cion del sol y del fuego (De relig. vet. Pers., c. ).
Beausobre lo aprueba; pero dice que este culto era
inocente por parte de los persas, de los maniqueos y
de los sabianos (Hist. del Maniq., t. 2, l. 9, c. 1.
n. 9). Segun su parecer entendian estos impíos, á no
dudarlo, mejor la cuestion que los cristianos. Hegel,
tambien calvinista, no está conforme con que se ta—
che de idólatra el culto que los chinos tributan á los
espíritus y á los genios, á las almas de sus antepasa
dos y á Confucio. Segun la multitud de deistas, el
culto que los paganos daban á sus dioses, no era
idolatria, puesto que indirectamente se referia al ver
dadero Dios; y los honores que tributaban á los ma
nes de los héroes eran homenajes dirigidos á la vir
tud. Sin embargo, aunque honremos en los santos
virtudes mucho mas puras que las de los pretendidos
héroes, se nos hace un crimen de ello. (V. PAGANIs
Mo S 4 y 5).
Basnage, tan poco justo como los demas, nos acusa
de adorar á los ángeles y á los santos; dice que
en Roma son condenados todos los que sostienen que
la adoracion solo se debe á Dios. (Hist. de la Igl., t. 2,
l. 18, c. 1, n. 2). Bien sabia que esto no es mas
que un fraudulento equívoco, porque nunca nos ser—
vimos de la palabra adoracion para hablar del culto
de los ángeles y de los santos, puesto que en la acep
cion comun esta palabra significa el culto supremo;
no ignoraba que la Iglesia romana hace profesion
de dar este culto á Dios solo. Sin embargo, le pare
ció mas util alucinar á los ignorantes que decir la
verdad. Pero por no dejar de contradecirse lo mis
mo que los demas, confiesa, n. 7, que es permitido
venerar á los mártires. Que nos demuestre que en la
Sagrada Escritura venerar y adorar no significan
nunca una misma cosa. Despues nos opone á Lactan—
cio que dijo que solo se debe venerar á Dios. Veremos
mas adelante de qué veneracion quiso hablar este
Padre.
Acumula este crítico contra nosotros pruebas ne—
TOM0 I.
 CUL 57. CUL
honrar y orar á Dios. Pero les prohibieron espresa los espíritus bienaventurados que nos miran y nos
mente honrar y suplicar á los ángeles y á los santos? asisten como sus asociados y como sus amigos. Estos
Pronto demostraremos lo contrario. Segun él, los sentimientos, ¿no tienen siempre por objeto principal
primeros cristianos solo araban á Dios, puesto que no á Dios, que se ha dignado concedernos este ausilio
nos queda ninguna oracion ni ningun himno de los poderoso?
primeros siglos dirigido, á los santos. Desgraciada Pero un protestante jamás desiste; los PP., dice
mente tampoco nos quedan de las que se dirigian, á Basnage, daban por señal distintiva del cristianismo
Dios; las liturgias no se escribieron hasta el fin del el culto de un solo Dios; por esto los cristianos fueron
siglo IV; en ellas se hace mencion de la intercesion acusados de ateos. Sostenian contra los arrianos que
y de la invocacion de los santos. Cita á Plinio el jo si Jesucristo no fuese Dios, no seria permitido ado—
ven y á Eusebio, quienes aseguran que los cristianos rarle ni confiar en él. Todo esto es verdad, y nada se
solo dirigian á Jesucristo sus himnos y sus cánticos, sigue contra nosotros: á un solo Dios tributamos
esta era una prueba de su divinidad. Esta cila es nuestro culto, y no á muchos dioses; los honores
¿ Plinio refiere que los cristianos se reunian el los respetos muy inferiores y muy diversos del culto
domingo para cantar himnos á Jesucristo como á un supremo, dirigidos á los ángeles y á los santos, lejos
Dios. Eusebio dice que en los cánticos de los fieles se de derogar el culto divino, son al contrario su efecto
le atribuia la divinidad, buena prueba de la creencia y su consecuencia inseparable. Si Jesucristo no fuera
de la Iglesia contra los arrianos, pero prueba nula Dios, seria impiedad adorarle como á Dios y con
contra nosotros; convenimos en que himnos, cán fiar en él como si, fuese Dios; este argumento era
ticos y alabanzas de la dicinidad, solo pueden ser di muy sólido contra los arrianos, no lo es menos con
rigidos á Jesucristo. Segun Tertuliano, continua Bas tra los socinianos; pero nada prueba contra nosotros,
nage, no se deben pedir heneficios sino al que los puesto que nunca hemos pensado en honrar con un
puede conceder. (Apolog., c. 30). Convenidos. Dios culto divino á los ángeles y á los santos, ni confiar
solo puede concederlos; pero los ángeles, los santos, en ellos como si fueran dioses.
nuestros hermanos vivos pueden obtenerlos para nos No solo acusaron de ateismo los paganos á los cris
OtrOS. tianos, sino que por una grosera contradiccion les
Por esto Santiago nos manda orar unos por otros, echaron en cara el honrar á los mártires como á dio
c. 5, y. 16. Tertuliano no condenó esta práctica. ses; las actas del martirio de S. Policarpo, Juliano,
«Vosotros os habeis aproximado, dice S. Pablo, á Libanio en la oracion fúnebre de este emperador,
la Jerusalen celestial, á la multitud de ángeles, á Porfirio y otros forjaron esta calumnia: los protestan
la asamblea y á la Iglesia de los primeros nacidos es les la repiten, lo que no les hace mucho ¿
critos en el cielo, á Dios que es el juez de todos, á Nos objetan que la distincion que hacemos de dos
las almas de los justos que estan en la gloria, á Je especies de culto religioso no se encuentran en los an—
sus mediador de la nueva alianza, etc.» (Heb., c. 12, tiguos PP.: veamos por qué, y procuremos entender
y. 22.) De qué nos sirve esta sociedad con los ánge— el verdadero sentido de lo que dijeron. Esta probado
les y con los santos, si nada pueden darnos, ni nada or todos los monumentos de la antigüedad que entre
tenemos que pedirles? Antes, de citar á Orígenes os paganos todo culto religioso era reputado culto di
debió leerle. Segun él, este Padre sostiene contra Cel vino, culto "¿ y que no conocian otro. Nunca
so que aun cuando los genios tuviesen el poder de atribuyeron los paganos á sns dioses de segundo ór
curar las enfermedades y hacernos algun bien, no den, ni á los manes de sus héroes un simple poder
deberíamos dirigirnos más que á Dios. Esta es una de intercesion, un poder subordinado á la voluntad
falsedad. Orígenes enseña lo contrario; hé aqui sus de un Dios soberano; cada Dios era independiente y
palabras, (l. 8, n. 13.) «Si Celso hablase de los ver— señor absoluto de su departamento: muchas veces nos
daderos ministros de Dios, que son los ángeles, y si presentan los poetas á los grandes dioses y al mismo
dijere que es necesario darles un culto, quizá despues Júpiter pidiendo ausilio á los dioses de un órden infe—
de haber esplicado el sentido de la palabra culto y rior. Demostraremos quese abusa de la palabra, cuan—
los deberes en que consiste, yo le ¿ lo que en do se concede á los paganos en general y aun á los fi
este particular conviene; pero como llama ministros lósofos anteriores al cristianismo nociones de un Dios
de Dios á los demonios adorados por los gentiles, re soberano, del que los demas solo eran, servidores y
husamos honrarlos y servirlos, porque no son los ministros; el prendido Dios supremo de los antiguos
verdaderos ministros de Dios, (ns. 3 y 36.) Los án filósofos era el ama del mundo, y esta alma no se
geles miran como sus asociados y sus amigos á los mezclaba en la direccion de las cosas de este mundo
verdaderos adoradores de Dios; se interesan por su ni se le puede atribuir una providencia mas que en
salvacion, y les ayudan y les hacen bien..... el an un sentido falso y abusivo.
gel de la guarda presenta á Dios las oraciones del que Aun despues del nacimiento del cristianismo, al
le ha sido confiado, y ruega con él, n. 60. En vez guros filósofos variaron de lenguaje, pero sin cambiar
de confiar en el ausilio de los demonios ó genios, en el fondo su sistema. Celso que aparentaba admitir
vale mas confiar en Dios por Jesucristo, pedirle toda una providencia divina la niega sin embargo, puesto
clase de socorros y la asistencia de los santos án que establece que Dios no se irrita mas contra los
geles y de los justos, á fin de que nos libren de los hombres que contra los monos y las moscas, y que no
malos demonios». Es esto desaprobar el culto de los los amenaza. Origenes contra Celso, lib. I, núm.99,
ángeles y toda confianza en ellos? Seria absurdo pre Jamas dijoque fuese necesario tributar un culto al Dios
tender que no debemos ningun reconocimiento, nin soberano: Porfirio establece espresamente que no es
guna confianza, ningun respeto, ningun homenaje á necesario darle ninguno, de ia Abstin. l. 2. n. 34.
 CUL 575 CUL
Todo el culto se reservaba para los dioses que gober cia; segundo por la razon; tercero por el sentimiento.
naban el mundo; con mucha mas razon la generalidad Convenimos en que no hay necesidad de una reve
de los paganos pensaban lo mismo. W. PAGANIswo. lacion para comprender que las oraciones y los votos,
Es, pues, evidente que todo culto era directo y ab— la acción de prósternarse, los ofrecimientos y ofren
soluto, se limitaba á la persona á que se dirigia, y das, las atenciones de respeto y compostura, las seña
no tenia ninguna relacion con un Dios soberano; era les de alegria á la vista de una persona, los temo
el mismo para todos los dioses y consistia en las mis res de desagradarla son capaces de escitar su bene
mas prácticas. Basnage observa que los antiguos no volencia: natural es deducir de esto que lo que agra—
conocian la distincion de latria y de dulia. Esto no es da á los hombres es tambien agradable á Dios: de
estraño; los paganos contra los que escribian no po— esta manera han discurrido todos los pueblos. Pero
dian tener ninguna idea de ella, puesto que entre ellos Dios no aguardó á que el hombre hiciese todas estas
todo era latria ó culto divino, adoracion tomada es— reflexiones; los libros santos nos dicen se dignó
trirlamente. instruir al primer hombre, puesto que los hijos de
Por esto, los PP. tuvieron que ser muy reservados Adan, que no habian tenido otro maestro que su pa
en el uso de la palabra culto religioso por el sentido dre, ofrecieron sacrificios al Señor (Gén., c. ), y
que los paganos la daban. Aun cuando todos hubie que los patriarcas usaron por religion de todas las
ran dicho como Lactancio que no se debe tener vene— prácticas de que acabamos de hablar.
racion mas que áDios solo, aun nada se seguiria, pues En la historia de la creacion se dice, que Dios
to que para ellos v los paganos veneracion, respeto, bendijo el sétimo dia y le santificó (Gén., c. 2, y. 3);
honor significan siempre el culto divino, el culto su— le consagró, pues, á su culto: no es el hombre el au
premo. Hé aqui por qué Orígenes dijo que se trataba tor de esta distincion. El descanso del sélimo dia era
entre Celso y él del culto de los ángeles; que era ne— una profesion espresa del dogma de la creacion, y de
cesario empezar por aclarar el sentido de la palabra consiguiente de la unidad de Dios; un preservativo
culto y ver en qué debia consistir. contra el politeismo y la idolatría, y los hombres no
Cuando los protestantes quieren convertir en pro cayeron en ella mas que por haber olvidado á Dios
vecho suvo a esplicacion de una palabra, tienen gran Criador. Cain y Abel ofrecen á, Dios en sacrificio su
cuidado de poner atencion en las circunstancias, en alimento, este era para ellos el mas precioso de los
las personas y en la cuestion de que se trata; cuando bienes (Gén., c. , y . 3 y l). Reconocian, pues, que
les conviene hacerla equívoca, no admiten esplica todo viene de Dios, y que á él toca prescribir el uso
cion alguna. Sin embargo, la Sagrada Escritura nos que debemos hacer de sus dones. -

obliga á distinguir dos especies de culto religioso, el Se dice de Enós (y.26), que empezó por invocar
uno para Dios solo, el otro para las personas y las co el nombre del Señor; pero los mas hábiles intérpre
sas que tienen una relacion especial con Dios; á pesar tes creen que el testo hebreo, dice: «Entonces come
de todo, no lo admiten. De doscientos años á esta par— tieron profanaciones invocando el nombre del Señor.»
te repiten los mismos sofismas, y los renovarán has El culto esterior de la religion estaba ya establecido.
ta el fin del mundo seguros de que siempre alucina Al concederá nuestros primeros padres para ali
rán á los ignorantes. Pero nuestras pruebas sacadas mento los frutos de la tierra les prohibió Dios un fruto
de la Sagrada Escritura quedan en toda su fuerza. particular (Gén., c. 1, y. 29; c. 2, y. 17). Despues
V. ANGELES, SANTos, MARTIREs. concedió á Noé y á sus hijos la carne de los animales;
Il. ¿Es absolutamente necesario el culto esterior pero les prohibió la sangre (c. 9, y, 3 y 4), Noé dis—
ara formar una religion? Lo es sin duda, y la prue— lingue animales puros é impuros (c. 7, y.2; c. 8,
¿ de esta verdad es palpable. Con dificultad nace y.20). Nueva prueba del respeto y de la dependencia
rian en el corazon de la mayor parte de los hombres que Dios exigia del hombre. Se deja aplacar por los
sentimientos de respeto, de reconocimiento, de con sacrificios de Noé (c. 8, y. 21).-Henoc se hace reco—
fianza, de sumision hácia Dios; no durarian mucho mendable por su piedad, y Dios le libra de las mise
tiempo en él, si no empleasen señales esteriores para rias de esta vida (c. 5, y.2).
manienerlos vivos y comunicárselos unos á otros, y No podrian menos de producir efecto tan enérgicas
para recordarlos: lo que no hiere nuestros sentidos, lecciones. Ya se habla en el libro de Job, que es de la
jamás hace una impresion viva y profunda en nues— mas remota antigüedad, de holocaustos y de sacrifi
tra alma. Necesita, pues, el hombre un culto esterior, cios por el pecado, de sacerdotes y de víctimas ele
signos espresivos de que conoce los símbolos y las ce gidas, de votos y de oraciones, de prácticas de peni
remonias. No podemos dar á Dios testimonio de nues tencia, de espiaciones y de abluciones: Vemos en la
tras afecciones mas que por las mismas señales que historia de los patriarcas puramente hechos en nombre
sirven para hacerlas conocer á nuestros semejantes. de Dios libaciones y efusiones de aceite oloroso, pro
* V. la conferencia de M. Frayssinous sobre el culto mesas hechas á Dios, honores concedidos á los muer
en general. tos, que atestiguan la creencia de la inmortalidad, etc.
Establece en ella en primer lugar, que el hombre Se ha escrito muchas veces, y sobre todo, en nues
debe á la divinidad un culto interior. Para conocer tros dias, que el culto de los primeros hombres era
esta obligacion basta consultar: 1 º las primeras no muy sencillo é independiente de los sentidos; que el
ciones de Dios y del hombre, 2.º los intereses mas ceremonial fue invencion de los sacerdotes é hizo de
preciosos y mas sagrados de la humanidad. generar bien pronto la religion. Estos son hechos refe
Sienta en ella, en segundo lugar, que el hombre ridos á la ventura, y contradichos por los libros santos.
debe á la divinidad un culto esterior y público. Esta El ceremonial de los patriarcas ni es muy sencillo
obligacion está demostrada, primero por la esperien ni independiente de los sentidos, puesto que en él en
 CUL 576) cUL
contramos súplicas y prosternaciones, altares y ofren los que se ha dignado concederá los demas; euando
das, sacrificios y eleccion de víctimas, abluciones, nos los da mayores de lo que necesitamos, es justo
espiaciones, abstinencia y votos, consagraciones, ju hacer participantes de ellos á los pobres. Puesto que
ramentos, alabanzas á Dios y señales de alegría reli es el único árbitro de la vida y de la muerte, no es
giosa, reuniones y comidas en comun, las fiestas, la lícito atentar contra la vida de nadie. Bendijo y san
costumbre de cambiar de vestidos antes de ofrecer un tificó el matrimonio; la fecundidad es un don de su
sacrificio, el cuidado de renunciará todas las señales poder, (Gén. c. 1, y ; 28; c., y. 1 y 25; es, pues,
de idolatría, honores fúnebres y respeto á los sepul un crimen profanar el del echo de otro, etc. La conduc
cros. Todo esto era conocido antes que hubiese sacer la de los antiguos justos demuestra que dedujeron to
dotes, y si no hubiera habido ceremonial, jamás ha - das estas consecuencias, ó mas bien, Dios se las hizo
bria existido el sacerdocio. percibir. No seria dificil probar que las ceremonias
Un hombre que desee con ardor atraerse las honda. del cristianismo encierran una leccion de moral aun
des de un bienhechor, ó aplacar á un señor irritado, mas enérgica y mas elocuente que todas las ceremo
no necesita las lecciones de los sacerdotes para ima nias antigras. V. CRIst IANISM0.
ginar cómo lo ha de conseguir: los deseos vehementes 3." El culto esterior es un lazo social que reune á
dan talento y destreza al mas estúpido, y un instinto los hombres al pie de los altares, les inspira senti
natural nos impele á hacer para con Dios lo que ha— mientos de fraternidad, conserva entre ellos el orden
cemos con nuestros semejantes. Ademas, Dios por si y la paz, y contribuye á la civilizacion: el culto pri
mismo, proveyó á esta necesidad. mitivo formó la sociedad doméstica, el culto mosáico
Luego no es cierto que el ceremonial hiciese de la sociedad nacional, el culto cristiano la sociedad
generar la religion, puesto que es tan antiguo co universal de todos los pueblos.
mo la misma religion. Al contrario, esta no degeneró º Este es un monumento de los hechos que en
hasta que los hombres se alejaron del ceremonial - la sucesion de los siglos han probado la revelacion; asi
prinitivo por seguir el instinto de las pasiones cie— la pascua y la ofrenda de los primogénitos recordaban
gas y caprichosas. Por lo cual, mientras que se es á los judios su milagrosa salida de Egipto; el Pente
traviaban, la religion de los patriarcas se conservó costés, la publicacion de la ley en el monte Sinai, etc.
pura y constantemente la misma por espacio de dos El domingo nos atestigua la resurreccion de Jesucris
mil quinientos años. to: nuestras fiestas celebran los principales aconteci
Los, filésofos, que tan mal concibieron el orígen mientos de su vida, etc.
del culto esterior, no conocieron mejor su importan Muchos filósofos de nuestros dias han dicho que solo
cia, y sin embargo, es palpable. el culto interior honra á Dios, principio muy cómodo
1." Siempre ha sido este culto una profesion so para dispensarse de toda práctica religiosa, pero prin
lemne de los dogmas mas esenciales, de la creacion, cipio muy falso. No hubiera Dios instituido el culto
de la unidad de Dios, de su providencia, de la caida esterior, si no se le honrase con él y no fuera nece—
del hombre, de la venida del Redentor, de la vida sario para conservar el eulto interior. Quisiéramos sa
futura. Los pueblos que no observaron fielmente el ber si los que renuncian á toda práctica sensible son
ceremonial que Dios lés habia prescrito, no tardaron los mas fervorosos adoradores de Dios.
en desconocer estas mismas verdades. Cuando Jesucristo dijo que los verdaderos adorado
El culto esterior del cristianismo es una profesion res rendirian á Dios un culto en espíritu y en verdad
esplícita de los dogmas de nuestra creencia; en todo (Joan., c., y.23), no quiso escluir el culto esterior,
tiempo sirvió para demostrar á los herejes la verda puesto que él mismo lo observó. Instituyó por sí mis
dera doctrina de Jesucristo y de los apóstoles, y para mo el Bautismo y la Eucaristia. Condenó, como los
aclarar, segun la necesidad, el sentido de los pasa profetas el culto puramente esterior, en que el corazon
jes de la Sagrada Escritura sobre que habia dudas. no tenia parte (Mat., c. 15, y.8); pero alabó las
Asi se opusieron á los arrianos los cánticos de los señales de compuncion del publicano, la ofrenda de
Cristianos en que se atribuia á Jesucristo la divini la viuda, y recomendó la oracion; hablando de las
dad; á los pelagianos las oraciones por las que la purificaciones y de las obras de caridad, dijo que era
Iglesia pide continuamente los auxilios de la gracia necesario practicar las una y no omitir las otras.
divina; y el papa Celestino I recurrió á estas mismas (Luc., c. 11, y. 2).
oraciones para averiguar la creencia antigua de la Frecuentemente no son mas que un rasgo de hipo—
Iglesia. Lo mismo se ha hecho para demostrar á los cresia las declamaciones contra los abusos del culto
protestantes que se han alejado de la fé primitiva y esterior. Los hombres abusarán siempre de las cosas
universal, y se ha sacado contra ellos de las antiguas mas sagradas; las pasiones saben convertir en su uti
liturgias un argumento, al que ninguna razon sólida lidad el mismo freno destinado á reprimirlas, pero el
han podido oponer. No debemos, pues, estrañarnos mas odioso de todos los abusos es querer suprimir
de que hayan suprimido entre ellos todo ese aparato todas las instituciones de que se pueda abusar. Se
esterior de culto que los condenaba. deberán desterrar de la sociedad civil las demostra
2° Es una leccion de moral que recuerda ince cisnes de benevolencia y a aislad, porque suelen ser
santemente á los hombres sus deberes para con Dios, muchas veces falsas y pérfidas?
para con sus semejantes y para consigo mismos; Cuando se trata de determinar lo que es necesario
deberes que naturalmente se deducen de los dogmas aprobar ó censurar, conservar ó abolir en el culto
de que acabamos de hablar. En efecto, si solo Dios esterior de la Iglesia romana, no estan mas en armo
es el distribuidor de los bienes de este mundo, es ne nia los protestantes que sobre los principios de que se
cesario contentarnos con los que nos da, sin usurpar debe partir. Los calvinistas le han reducido á la pre
- -
 CUL 577) CUL
dicacion, á la oracion pública, al canto de los salmos, hemos hecho ver que por el contrario son un medio
á la ceremonia del bautismo y á la de la cena hecha º Dios eligió para instruirá los hombres. Una parte
sin ningun aparato: todo lo demas lo han creido abu e la instruccion cristiana consiste en hacer com
sivo. Los luteranos han conservado algo mas, pe prender al pueblo el sentido y las razones de las ce
ro su ceremonial no es uniforme en todos los paises. remonias religiosas.
Los anglicanos han retenido mas que las otras sectas Este aparato esterior, observan aun los proteslan
y es uno de los cargos que estas les hacen ; dicenles tes y los incrédulos, será siempre un lazo para el
que son todavia medio papistas, que se deben abolir pueblo; este hace uas caso de ceremonias que de vir
todas las supersticiones de Roma ó conservarlas todas. tudes, y cree como los judios de haber cumplido con
Asi un escritor de esta nacion confiesa que no es fá— todo lo justo cumpliendo con el culto esterior.
cil determinar hasta qué punto conviene contempo Nuesros adversarios no notan que se contradicen
rizar con la debilidad humana en materia de cere— en esto, puesto que el pueblo ama las ceremonias, las
monias, ni fijar un medio que pueda alhagar los sen da mucha importancia, y las mira como una parte
tidos y la imaginacion sin dañará la razon, ni em esencial de la religion; se deduce que es él quien las
pañar la pureza de la verdadera religion. Singular ha querido, y no los sacerdotes los que las han inven
es que, sin saber hasta dónde era necesario llegar tado. Aun cuando estos no se hubieran mezclado en
y á donde detenerse, se empezara por condenar á la nada, el pueblo las hubiera establecido á pesar de
Iglesia romana, y se la acusase de haber pasado todos ellos, y en despecho de los filósofos; todos los pueblos
los límites, cuando no se podia decir dónde era ne del universo, hasta los salvajes, tienen ceremonias y
cesario fijarlos. un culto esterior cualquiera. -

Se la acusa de haber establecido una multitud de Pero aun hay mas: Dios sabia indudablemente me
ceremonias ridículas que destruyen la verdadera re jor que nuestros censores los inconvenientes, los abu
ligion, que no tienden mas que á enriquecer al clero sos y los errores á que darian lugar las ceremonias,
y mantienen á los pueblos en la ignorancia y en la y sin embargo las prescribió desde el principio del
supersticion. Pero esta misma acusacion no supone mundo, aumentó mucho su número cuando dió su ley
una crasa ignorancia ? á los judios, y el mismo Jesucristo se dignó observar
1.º Tan ridículas son á los ojos de los deistas las las. Preveia todos los males que el culto este
ceremonias de los protestantes, como las nuestras: rior podria ocasionar en su Iglesia; sin embargo, dió
no quieren ningunas; lo que los protestantes pudie - á sus apóstoles poder para establecerlo puesto que
ran decir para justificar las suyas, nos serviria para lo hicieron. Si fuese este mal tan efectivo y tan gran
hacer la apología de las nuestras. " de como pretenden nuestros adversarios, seria es
2." El clero no ha podido tener ningun motivo de traño que Jesucristo , no hubiese tomado alguna
interés en multiplicar las ceremonias, puesto que las precaucion para evitarle, y que no hubiera dado so—
retribuciones ó los derechos eventuales no se estable bre este punto los avisos mas claros, y , las mas
cieron hasta despues del siglo VIII, cuando los bie - espresas lecciones. ¿Y dónde estan en el Evan
nes de la Iglesia fueron usurpados por los señores. gelio?
Podrán probar que la multitud de ceremonias no tu Los abusos, si los hay, datan de muy lejos. Creian
vo origen antes de esta época? Brevemente probare los pretendidos reformadores que la multitud de ce
mos lo contrario. Tambien se han visto precisados remonias se introdujo en los siglos medios, en medio
en Inglaterra á establecer un derecho eventual des - de las tinieblas de la ignorancia. Habiéndolas encon
ues de la dilapidacion de los bienes eclesiásticos por trado en las seclas orientales, ha sido forzoso con
os protestantes, y estos derechos son mucho mas venir que el ceremonial era mas antiguo que su cis
subidos que en Francia. El clero anglicano, pues, ha ma; y se colocó su origen en el siglo IV. Pero los
tenido mas interés para inventar nuevas ceremonias críticos mas modernos con una esquisita sagaci
que los sacerdotes católicos. dad han descubierto que el mayor número de ce
3." Las sectas de los cristianos orientales se se remonias tuvo su origen en el platonismo de los an
pararon de la Iglesia Romana desde el siglo V; no tiguos PP. Ahora bíen, no solo ven este platonis
obstante su ceremonial está al menos tan cargado co mo en los escritos de los autores del siglo II, sino
mo el nuestro, y no por eso es su elero mas rico. En que los socinianos y los deistas lo entreveen en el
vano buscamos en toda la antigüedad eclesiástica Evangelio de S. Juan, y su Apocalipsis nos pre
pruebas del pretendido interés de los sacerdotes en senta el plan de una pómposa liturgia. Véase El
aumentar las ceremonias. Son indudablemente mas TURGIA.

antiguas que los cismas de los orientales. Esta es la concordaneia que entre sí tienen nues
4.° No se pueden establecer, nuevas ceremonias tros adversarios sobre el origen del ceremonial.
mas que por los obispos; ahora bien, ningun interés Ill.- Son un abuso la pompa y la magnificencia en
pudieron tener nunca estos, puesto que sus riquezas el culto esterior de la religion? Asi lo creen los in—
siempre han consistido en fondos y no en derechos, crédulos y la mayor parte de los modernos diserta
eventuales. Hé aquí cómo se discurre al acaso cuando dores, llan juzgado que en un siglo en que el lujo
no se quiere consultar la historia. . Tenemos noticia se ha llevado al colmo y arruina todas las clases, en
de muchos concilios ó asambleas del clero, que han nada seria mas necesaria la economia que en el cul
proscripto ceremonias nuevas y supersticiosas; pero to divino; han calculado esactamente su coste; sa
no se nos citará uno que las haya íntroducido. Nnn ben lo que cuestan la cera, el pan bendito, los fu—
ca acertaremos á concebir en qué pueden contribuir nerales y los gastos de fábrica. llé aquí lo que se -
las ceremonias á manteneral pueblo en la ignorancia; guramente arruina al pueblo; es necesario supri
 CUL 578 CUL
mir lo supérfluo. Se nos figura ver á los atenienses pº para ofrecer un sacrificio á la cabeza de su
con lenando á muerte á cualquier ciudadano, que qui amilia, mandó á sus gentes que se lavasen y cam
siese emplear el dinero en otra cosa que en espectá— biasen de vestidos. Gén., c. 35.y. 2. Dios mandó lo
culos. mismo á los hebreos cuando se dignó darles su ley en
Para nuestros sabios economistas animados del el monte Sinaí. Erodo, c. 19, y 10. Esta señal es
mismo espíritu es sumamente laudable prodigar las terior de respeto se ve en todas las naciones; todas,
riquezas en fiestas públicas, en teatros que corrompen sin escepcion, ponen en los homenages que rinden á
las costumbres, en diversiones de toda especie; pero Dios la mayor pompa que les es posible.
deploran los gastos que se hacen para los espectácu Sin embargó, nuestros filósofos pretenden justificar
los de religion, porque instruyen á los hombres, les su opinion. « El esceso de la magnificencia del culto
inspiran la virtud y los consuelan con la esperanza de público, dicen, escita la de los particulares; todos
la dicha futura. Aparentan compadecerse de la mise quieren imitar lo que mas admiran. No es cierto que
ria del pueblo. y no solo no se privan ni aun del me esta magnificencia sea necesaria; los primeros cristia
nor de sus placeres por aliviarla, sino que quisieran nos pensaban de otro modo. Orígenes afirma que ha
quilar al pueblo el solo medio que le queda para con - cian poco caso de los templos y de los altares. En
solarse y alentarse en los templos del Señor con moti medio del universo es donde se debe adorar al que se
vos religiosos. Es preferible, segun su opinion, que cree su autor. Un altar de piedra elevado sobre una
vaya á distraer su miseria á lugares peligrosos y á las altura en medio de un vasto horizonte seria mas au
escuelas del vicio; por eso las han multiplicado tanto gusto y mas digno de la magestad suprema que esos
para su comodidad. Pero ¿á dónde iran los que temen edificios en los cuales parece que están encerrados
el contagio de estos lugares apestados y no quieren entre cuatro columnas su poder y su grandeza. El
pervertirse? Dejemos desvariar á los insensatos, y pueblo se familiariza con la pompa y las ceremonias
consultemos la simple luz natural y la esperiencia de con tanta mas facilidad, cuanto que siendo practica
todas las naciones. das por sus semejantes están muy en contacto con él
Es necesario dar á los hombres una grande idea y son muy poco á propósito para imponerle; bien
de la Magestad Divina y hacer su culto respetable; pronto la costumbre se las hace indiferentes. Si la
y esto no se puede conseguir sin el auxilio de una Synaxis se celebrara una sola vez al año, y se reu—
pompa esterior. El hombre solo se impresiona por los nieran diversos lugares para asistir á ella, como se
sentidos; hé aquí el principio de que es necesario par hacia á los juegos olímpicos, pareceria de mayor im
tir; no se conseguirá cautivar su imaginacion sino po portancia. Tal es la suerte de todas las cosas; cuanto
niendo ante sus ojos objetos á que dé gran precio. Si menos comunes son , son mas veneradas.»
el pueblo no encuentra en la religion la magnificencia Esta sublime doctrina estaba ya consignada en las
que ve en las ceremonias civiles, si no ve al menos dos Enciclopedias; tambien se encuentra en el Diccio
triblará Dios homenajes tan pomposos como los que nario de Monedas. Seria lástima que se perdiera. Des
se rinden á las potestades de la tierra, ¿qué idea se graciadamente es falsa bajo todos aspectos. Desde lue
formará de la grandeza del Señor á quien adora? Tal go nos parece que envuelve una contradiccion. Por
es la reflexion de santo Tomás. Los protestantes sien un lado se teme que la magnificencia del culto escite
ten hoy los funestos resultados de la pobreza á que re la de los particulares; por otro, quisieran ver en él
dujeron el culto divino: hasta un incrédulo convino tanta pompa y aparato como en los juegos olímpicos,
en que la restriccion del culto en Inglaterra desterró á fin de que fuese mas venerable, mas imponente y
la piedad é hizo renacer en ella el ateismo y la irreli mas capaz de escitar la admiracion. Esto no se puede
gion; el desprecio de este culto ha producido el mis— conciliar.
mo efecto en Francia. Pero, 1." Es falso que la magnificencia del culto
Cuando se nos pregunta con Juvenal de qué sirve inspire gusto por el lujo. Un particular conoce bien
el ºro de los templos: dicite, pontifices, in templo que seria absurdo é impio hacer para sí lo que se hace
quid facit aurum? respondemos que sirve para ates para Dios, y tomar la magestad de los templos por
tiguar el respeto que se debe á Dios, para reconocer modelo de su morada. En el tiempo que los reyes
qoe todos los bienes emanan de él, y que todo debe francos, borgoñones, godos y vándalos aun bárbaros
estar consagrado á su servicio. Los que rehusan con no conocian para sí la magnificencia, les gustaba
tribuir á la pompa del culto divino no están por eso verla en los templos del Señor y contribuian á ella;
mas dispuestos á socorrer á los pobres. El pueblo esto contribuyó algo á civilizarlos. Convendria que
quiere la magnificencia, porque ama la religion que siempre nos acordásemos de esta pompa del culto;
es su único recurso; los incrédulos reprueban este conservó en Europa un resto del conocimiento de las
imponente aparato porque la deteslan. artes. Véase ARTes. Cuando hay lujo y pompa civil en
Es conveniente que el pueblo se vista lo mas de una nacion , es imposible disminuirla en el culto sin
centemente que pueda para asistir á las reuniones re envilecerle á los ojos de la multitud. No es la pompa
ligiosas los dias de fiesta, á fin de que este aparato es— religiosa la que despierta el gusto por el lujo; sino
terior les recuerde la pureza de alma con que deben que el lujo, una vez introducido, nos hace desplegar
concurrir á ellas; á fin de que los grandes que des mas aparato en las ceremonias de la religion.
precian estas reuniones tengan menos repugnancia en 2.º. Es falso que la vista del cielo y de un vasto ho—
mezclarse con el pueblo, á fin de que la enorme dis— rizonte haga más impresion en la generalidad de los
tancia que ponen las riquezas entre unos y otros des - hombres que un templo decentemente adornado. El
aparezca por un momento ante el soberano Señor, á pueblo esiá mas acostumbrado á ver el cielo y el
los ojos del cual todos los hombres son iguales. Jacob campo que pomposas ceremonias; no medita sobre el
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 CUL 579 CUL
movimiento de los astros, ni sobre la magnificencia hay dos á los que dictase el mismo culto. Si se reu
de la naturaleza. El sacrificio ofrecido al cielo una vez niesen los seclarios de las diferentes religiones del
al año sobre un monte por el emperador de la China mundo, cada uno diria que el culto á que está acos
á la cabeza de los grandes del imperio, es sin duda im tumbrado es el mas razonable de todos, ademas de
ponente;, sin embargo, no ha impedido al pueblo, á que todo pueblo pretende que sus leyes, sus usos y
los grandes y al mismo emperador caer en el politeis sus costumbres son las mejores. Cuando un filósofo
mo y adorar á los ídolos en las pagodas. Este es un nos aconseja que consullemos la razon, entiende su
hecho incontestable. Los persas y los cananeos ofre razon propia y, personal, y supone siempre modesta
cian tambien sacrificios sobre los montes; pero no por mente, que es el mas razonable de todos los hombres.
eso dejaron de adorar mamarrachos bajo las tiendas. Es necesario alenerse á la Sagrada Escritura, á
Asi Dios prohibió estos sacrificios á los israelitas, lo que los apóstoles han prescrito ó practicado, a lo
quiso le erigieran un tabernábulo, y despues un tem que Jesucristo ha hecho ó mandado. Los reformado
plo. Montesquieu observa con mucha oportunidad que res han hecho profesion de seguir esta regla, y el
todos los pueblos que no tienen templos son salvajes resultado nunca ha sido el mismo. Por otra parte, es
y bárbaros. Qué sirve argumentar contra los hechos? falso que la hayan seguido, y que sus sectarios se
3." Es falso que los primeros cristianos pensaron atienen á ella. Jesucristo lavó los pies á sus apóstoles
como nuestros filósofos. No podían tener templos cuan antes de darles la Eucaristía, y les mandó espresa
do se veian precisados á ocultarse para celebrar los mente hacer lo mismo, (Joan., c. 13, y . 14). Sopló
misterios sagrados, pero edificaron iglesias apenas se sobre sus discípulos para dar es el Espíritu Sanio,
les permitió, las que fueron demolidas en la persecu (c. 20, y .22). Sin embargo, los protestantes no hacen
cucion de Dioeleciano. Indudablemente ya las habia en ni lo uno ni lo otro. Los apóstoles imponian las ma
tiempo de Orígenes. Véase la nota de los editores, l.3, nos sobre los fieles para darles el Espíritu Santo;
contra Celso, n. 17. Nunca celebraron los cristianos Santiago quiere que los sacerdotes den la uncion á
sus reuiones en campo raso. los enfermos para perdonarles los pecados; ¿por qué
En fin, es falso que el culto esterior haya no practican estos ritos los protestantes? Si se nos
..."
llegado á ser indiferente al pueblo; prueba lo contra pregunta por qué hacemos los unos y omitimos los
rio esa multitud reunida en nuestras iglesias los dias otros, nuestra razon es muy sencilla; es porque la
de fiesta con gran pesar de los incrédulos. En el cam Iglesia ros lo manda y asi nos lo enseña. Al menos
p0, en que el pueblo tiene todavia mas piedad que en
las ¿ ningun particular deja de asistir á los
nuestra conducta está en armonia con nuestros prin
cipios: la de los protestantes no se puede conciliar
oficios divinos, mientras puede; muchas veces asiste con los suyos.
á misa los dias de trabajo. No podria tener este con - Un culto es supersticioso cuando es falso, ó está
suelo si se celebrase tan de tarde en arde como los apoyado en una falsedad; tal era el de los paganos,
Juegos olímpicos. que tenian por dioses á pretendidos genios, espíritus
lV. A qué se debe llamar culto supersticioso, fal 0 demonios, que solo ecsistian en su imaginacion; era
so, indebido ó supérfluo? Nada mas comun en los es— indebido, porque tributaban á las almas de los muer
critos de los herejes y de los incrédulos que el nombre los un culto divino que no les es debido, y que estaba
de supersicion, pero todavia no sabemos con claridad fundado en razones falsas. Era supério, porque
qué entienden por él. consistia en prácticas inventadas por puro capricho,
Los teólogos llaman supersticioso á todo culto que
Dios ha prohibido ó que no ha ordenado ni aprobado;
por terrores pánicos, ó por otras razones todavia mas
odiosas. Era pernicioso, porque muchas de eslas
debe ser reputado por lal cuando la Iglesia ni lo prácticas eran criminales. El de los judíos, legítimo
aprueba ni lo manda, y con mucha mas razon cuando en su origen, se ha hecho supersticioso, porque era
lo prohihe, porque Dios concedió á su Iglesia la au relativo á un tiempo, á lugares, á razones que no
loridad de enseñar á los fieles la verdadera doctrina, eesisten y á promesas que se han cumplido. El de los
tanto, sobre el culto como sobre el dogma y sobre la mahomelanos es falso y supersticioso, porque es obra
moral: ya hemos deamostrado la relacion necesaria de de un impostor, que no tenia mision ni carácter para
estas tres partes de la religion. Jesucristo que pro establecerlo, y la mayor parte de los ritos
metió eslar con su Iglesia hasta la consumacion de en que consiste están apoyados en fábulas. El de
los siglos, asistirla siempre por el Espíritu Santo para los prolestantes es supersticioso, porque es ilegítimo,
enseñarla toda verdad no puede permitir que mande fijado y regulado por hombres que no tenían poder
ó apruebe un culto falso, ábsurdo ó pernicioso. Los ni carácter; por legos que solo hán seguido su capri
¿ que defienden que io ha hecho y que cho en lo que han conservado ó restringido.
hace todavia despues de mil quinientos años, acu Para alenuar la temeridad de este atentado ha sido
san indirectamente á Jesucristo de haber faltado á necesario enseñar que el culto esterior es indiferente,
sus promesas. que cada sociedad eristiana debe tener la libertad de
En vano se nos dice, que para distinguir lo que es arreglarle como lo crea á propósito; como si pudiera
ó no supersticion, es necesario consuliar á la razon. haber alguna cosa indiferente en el culto que es ne—
Si preguntásemos á la razon de los incrédulos, la cesario dará Dios; como si el culto no tuviera ningu
mayor parte decidiria que todo el culto, cualquiera na relacion con el dogma ni la moral, Dios no dejá
que sea, es supersticioso, que no hay Dios ó que si esta libertad ni á los patriarcas ni á las hebreos á
hay uno, ningún culto exige de nosotros. los apóstoles y áestablecerle
sus sicesores es á quien dió poder
Los fundadores de las diversas sectas protestantes Jesucristo y regularle, y no á los
siguieron indudablemente las luces de su razon y no simples fieles; y una vez fijado, ninguna potestad
 CUM 580 (CUR
civil tiene derecho para añadir ó para quitar nada, pusieron que los curas tuvieran á lo menos 25 años
Es muy singular que toda ¿ cumplidos, suponiendo que á lo menos se necesitaba
haya
tenido derecho de ordenar su culto, como le ha pare
un año de ejercicio en el ministerio para serlo. Esta
cido, y que la Iglesia romana no tenga el derecho de
ley se inserto en la declaracion de 13 de enero de 1742
establecer y conservar el suyo. V. CEREMONIA, Su—
y se registró en el parlamento de París el 26 del
PERsticioN, LEY Es CEREMoNIALEs. mismo mes y año. En la actualidad ya se tiene por
derecho cierto, que para obtener curato deben ser
Cumplimienato de las profecías. Véase presbíteros, y de edad de 25 años cumplidos; sin estas
PROFECiAS. dos cualidades toda colacion y provision será radical
mente nula, el curato queda impetrable, y ni aun la
Curato y Cura ( Derecho eclesiástico). posesion trienal puede quitarle este defecto.
Llaman curato á un beneficio eclesiástico que pide ¿Sucede acaso lo mismo con el grado para ser cura
residencia, y cuyo titular tiene á su cuidado en lo en las ciudades amuralladas? El concordato trae una
espiritual un cierto número de personas que viven disposicion formal sobre esto: «Mandamos, dice, que
dentro de una comarca que se llama parroquia; y se las iglesias parroquiales que se hallan en las ciuda
llama cura el sacerdote que obtiene un curato. No des muradas ó cerradas, no se confieran mas que á
es eslraño que los ministros de la religion influyan eclesiásticos calificados como se ha dicho, ó que ha
muchas veces en la situacion de sus feligreses, siendo yan estudiado á lo menos tres años en teologia ó dere
al mismo tiempo los intérpretes de la ley divina y los cho, ó que sean maestros en artes»; hé aqui la ley que
que esplican las leyes civiles. Este doble carácter se es bien positiva. Para ser uno cura in civitatibus, es
halla especialmente en la persona de los curas. El le decir, en las ciudades episcopales et in villis muratis,
gislador reunió á la administracion de varios sacra— es decir, en las ciudades ó villas que estan cercadas,
mentos los efectos civiles de la mayor importancia; y debe ser doctor, licenciado ó bachiller en alguna de las
los curas, que son ministros natos de los sacramen tres facultades mayores: es lo que se entiende con las
tos, están encargados de la ejecucion de una parte palabras calificados como se ha dicho, premisso modo
de las leyes; y, si la religion se sirve de ellos para qualificatis. El concordato no exige que hayan reci
conducir á los fieles á la vida eterna por medio del bido estos grados, sino tres años de estudios en leolo
cumplimiento de los preceptos revelados, el Estado gia, en derecho, ó bien ser maestros en artes. Esta dis
igualmente se sirve de ellos para asegurar y fijar la ¿ del concordato es en todo semejante á la de
ecsistencia legal de sus feligreses. Su rango y su es a pragmática sancion sobre el mismo asunto, y á la
tado son sin duda inlinilamente respelables, tanto en ordenanza de Luis XII del año 1499. Si se consulta
lo político como en lo cristiano. solo la letra de estas diferentes leyes, parece bien cla
Poco importa que el nombre de cura traiga su ori ro que tres años de estudio de teologia ó derecho son
gen de la palabra curia ó curio. Una y otra se hallan suficientes para obtener un curato en una ciudad mu
usadas indistintamente en los concilios del siglo XI y rada. Sin embargo, hay muchos autores que presu
XIII en los cuales se llaman los curas unas veces men no es suficiente este tiempo de estudios, sino se
curati y otras curiones. Las palabras parrocus, pleba ha obtenido el grado, porque cómo se da, previo ec
nus, rector se usan para designarlos, y en algunas samen? es lo único que puede suministrar una prueba
partes han conservado esta denominacion porque en de capacidad, y se fundan en la ordenanza de Enri
ibretaña los llaman rectores. que il dada el año de 1551. Pero reflecsionando
Un cura debe ser presbítero de edad de 25 años en esla ordenanza, no se ve en ella que el legislador
cumplidos y debe estar graduado si su curato está derogue la de Luis XII, ni la pragmática sancion ni
en una ciudad amurallada. Segun el derecho antiguo el concordato, el cual previene que los litigios promo
podia ser nombrado para un curato cualquiera que vidos en los euratos de las ciudades amuralladas sean
podia ordenarse de presbítero dentro de un año de la juzgados segun el tenor de los estatutos, decretos y
pacífica posesion; bastaba tener 23 años cumplidos, concordatos sin tener consideracion á las impetracio
puesto que á los 24 igualmente cumplidos podia reci nes que puedan hacerse, ú obtenerse subrepliciamen
bir el sacerdocio, y lo mismo sucedia con las digni te por los que no sean graduados ó no tengan las cua
dades que tenian cura de almas. lidades prevenidas en dichos concordatos. Enrique Il
Nuestros reyes, protectores natos de los cánones y se reliere á los concordatos precedentes mandando se
de la disciplina eclesiástica, y que por lo mismo tie pongan en ejecucion, sin derogarlos en nada, y dice
nen derecho á dar leyes sobre todo aquello que no igualmente que no se atienda á las impetraciones he
pertenece á la doctrina ó asuntos pura mente espiri chas por los que no están graduados, ó que no tengan
iuales, trataron de derogar un uso que podria traer las cualidades prevenidas en los dichos conºordatos:
consigo grandes inconvenientes, de los que acaso era ya se sabe que una de ellas es el haber estudiado tres
el menor el confiar las parroquias al cuidado y poca años de teologia ó derecho. En este articulo de la or
vigilancia de los presbíteros mercenarios que las ser denanza de Enrique Il no hay cosa algana que sea
vian hasta que llegaban á los 2 años los verdaderos contraria al concordalo y demas leyes qne las han pre
titulares, y asi resolvieron que ninguno pudiese ser cedido, las cuales solo piden tres años de estudios en
nombrado cura sin haber ascendido al sacerdocio. Aun
las facultades referidas para poder obtener un curato
hicieron mas por el bien de la Iglesia; creyendo que en una ciudad amurallada.
un presbítero recientemente ordenado no estaba en Sin embargo, Dumoul es de opinion contraria, y re
aquella edad madura, ni lenia esperiencia bastante fiere el decreto de 1536, que dieron todas las cáma
para ejercer dignamente las funciones pastorales, dis ras reunidas, en el cual se dice que los tres años
 CUR 581 CUR
de estudios en teologia ó en derecho son insuficien provision; pero seria , muy injusto que este favor
tes sin el grado. Otros muchos autores respetables no siendo por efecto de la ley, hiciese perjuicio á
han seguido la misma opinion. Las memorias del cle otro cualquiera que hubiese adquirido un derecho á
ro dicen que sobre este punto no hay prevencion él. Observaremos como de paso que un devolutario
alguna en los decretos, ni se ha presentado toda solo tiene derecho al beneficio devuelto desde el dia
via el caso, y la razon, es porque los que han estu— en que presenta su demanda pidiendo en justicia.
diado tres años de teologia ó derecho pueden gra Las provisiones de los curatos de esta naturaleza
duarse facilmente, prefiriéndolo al riesgo de enta obtenidas en la corte de Roma por la via de la pre
blar un litigio dudoso. Pero si los tres años pare vencion son nulas, si el ordinario ha conferido di
ce que bastan, segun la ley, aunque sea sin el gra cho curato á uno que esté graduado antes que el que
do, para obtener un curato en una ciudad amu— ha sido provisto por el papa tenga este requisito.
rallada, no sucede lo mismo con el sin los años Estas provisiones son nulas porque, como dice
de estudios, porque es cierto que el cura que se vie— Dumoulin, concordatis Papa ipse ligatus est, et non
se en el caso de haberlo impétrado de este modo, videtur jure prepentionis conferre posse, hujusmodi
se veria privado del curato aunque estuviese en po parrochiales ecclesias misi qualificatis: Debemos decir
sesion de él. En esto no hay dificultad despues de con Boutaric que no se le puede dar al grado un
la declaracion de 1736, registrada en Paris y en efecto retroactivo con respecto á la provision en
Tolosa, la cual manda: «que todos los que en lo perjuicio del derecho que adquirió el graduado pro
sucesivo se graduen en las universidades del reino visto por el ordinario, y el mayor favor que se pue
tengan que conformarse esactamente, por lo que de admitir en este pinto es el hacer subsistir la
toca á los años de estudios y al ecsámen , y actos provision del papa, si al tiempo que recibió el gra
de prueba, necesarios para obtener el título de maes do el ordinario no ha usado de su derecho. Si al
tros en artes, ó los de bachiller, licenciado y doc prevencionario provisto por el papa, se le permite
tor, á las reglas establecidas por el concordato ó esto, no sucede lo mismo con el devolutario aunque
por las ordenanzas del reino ó estatutos y regla su situacion le favorezca tan p0co; por esta mis
imentos particulares de las universidades, so pena ma razon no se permite molerar el rigor de las
de nulidad de los títulos y grados que se les ha leyes con respecto á él. Por otra parte, quién será
yan concedido, contra lo que se previene, y ade capaz de pedir al papa un beneficio, faltándole los
mas la destitucion de las dignidades, curatos y de mismos requisitos que alega les faltan á otros? Quién
mas beneficios que hayan obtenido en virtud de será el que pida un curato sin estar graduado, dicien
ellos». do que el titular actual tampoco está graduado?
Otra cuestion no menos importante sobre la cual Eso seria una contradiccion , porque era lo mismo
hay mucha diversidad de opiniones es la de saber que decirle al papa: «despojad á este titular que
cuando se requiere por el concordato el grado para no se ha conformado con la ley para revestirá otro
ser cura en una ciudad amurallada. Deben estar que se halla en el mismo caso»; por lo cual diremos
graduados antes de la provision , ó basta obtener el otra vez con Dumoulin concordatis Papa ipse liga -
grado antes de la toma de posesion? Para tratar con tus est. Con todo, debemos confesar que estos prin
claridad estas cuestiones, es preciso proponer las cipios acerca de los devolutarios no estan apoya
diferentes hipotesis con la solucion que se les pue dos en ningun decreto por no haber ocurrido nin
de dar. gun caso de esta especie: pero creemos que no se
La colacion de un curato de una ciudad cercada, gian aplicables si antes de impetrar los curatos de
hecha por el ordinario en un sugeto que no esté gra las ciudades referidas no hubiesen recibido el gra
duado, no es radicalmente nula, segun el parecer do antes que los otros pretendientes, que no lo te
de los mas; porque esta falta se suple si el el provis— lla l.
to recibe el grado antes de la toma de posesion: asi Es bien raro que un resignatario nos haya dado
lo ha pronunciado el parlamento de París en 9 de lugar á la cuestion que agitamos: como antes de su
febrero de 1699, en 12 de julio de 1700, y en 15 toma de posesion el beneficio parece que reside en
de marzo de 1701, segun refieren las memorias del cabeza del resignante, segun el espíritu de la juris
clero. Sin embargo, hay que observar, que si otro prudencia actual, le basta al resignatario recibir el
tercero adquiriese un derecho al beneficio en el es— grado con su aprobacion, ó tomar la posesion; Pe
pacio que media desde la colacion á la recepcion del ro despues de esta puede acaso recibir el grado , y
grado, entonces el que ha sido primeramente pro por este medio librarse de las imperaciones? Un
visto no se le admite á, desvanecer la dilacion que decreto del parlamento de Paris del 8 de enero
haya, y el devolutario que haya introducido su de— de
ñor 1738
Cadot,parece
Cura, que
de laestá por laEvèque,
Ville-L' aimaliva: el ha
que se se
manda antes que su adversario haya recibido el gra
do, será mantenido en su derecho. bia graduado despues de la toma de posesion, fue
Cuando al que ha sido provisto en un curato mantenido en su derecho contra el señor de Lacosle
de esta naturaleza se le concede un término pa devolutario, el cual no le habia emplazado ni de
ra que se gradue, el grado que óbtiene posterior mandado en justicia hasta despues que le dió lu
mente á la provision adquiere un efecto retroacti gar de graduarse. Pero, como observa el anotador de
vo que la cómpleta y perfecciona, lo cual es un pu llericourt, no puede servir de sentencia decisiva este
ro favor que los tribunales han querido conceder á decreto dado, en unas circunstancias particulares,
algunos, juzgando que era indiferente que la capa porque seria dar mucha latitud á la interprelacion del
cidad del sugeto se acreditase antes ó de la concordato, y daria márgen á que se introdujese
TOMO l. 79
 CUR 58 CUR
una jurisprudencia, que insensiblemente destruiria la La pragmática sancion, en el párrafo 13 del cap.
ley misma. Los curas de las referidas ciudades podrian 2.º manda que los referidos curas sean personas que
estar diez ó veinte años sin graduarse, y cuande trata esten calificadas. La espresion instituantur; que se
sen de inquietarlos se graduarian, poniéndose bajo la instituyan, no deja duda alguna; es lan imperativa
proteccion de las leyes despues de haberlas eludido como lo declara ella misma; es relativa por cierto al
por largo tiempo. La intencion de las dos polestades momento de la institucion, no pude darse la supo
de quienes dimana el concordato ha sido el colocar sicion de que pueden ser válidamente conferidos los
en las parroquias de mayor poblacion y mas ilustra dichos curatos á los que no esten graduados. No es
das unos pastores que hayan dado pruebas de una posible dudar de la intencion de la ley al ver que en
capacidad mas que regular. Han querido que los cu el párrafo 19 pronuncia el decreto irritante contra to
ras en las ciudades amuralladas fuesen unos minis das las colaciones hechas sin atender á los decretos
tros de cuyas luces y talentos no se pudiese dudar, contenidos en ella, entre los cuales se encuentra el de
y que por consiguiente hubiesen sufrido aquel ecsa los espresados curatos.
men que á lo menos hace presumir que tienen un La ordenanza de Luis XII de 1499 se esplica tam
mérito suficiente, aun cuando no sea una prueba cier bien con toda claridad. «Los graduados que quieran
la de él. Por lo mismo, es contra el espíritu y la in obtener las iglesias parroquiales que estan dentro de
tencion de los legisladores el admitir en cualquiera muros deberán haber estudiado los años que se han
ocasion á los curas de las ciudades amuralladas á to dicho arriba, y hacer lo que se ha dicho ya». Esta
mar el grado que ecsige el concordato. ¿Pueden acaso espresion, los graduados que quieran obtener las igle
conducir estos principios á resolver la cuestion de sias parroquiales; solo puede entenderse del tiempo
si la posesion trienal puede cubrir la falta del grado que precede á la provision. Se trata de los sugetos que
en un cura de una ciudad de esta naturaleza? Debe— uieren obtener los curatos de las ciudades amura
mos distinguir desde luego entre el que haya estudia ¿ y á ellos solos les impone la ley las condicio
do tres años de teologia ó derecho sin tener el grado. nes. Si no las cumplen, son incapaces, porque es una
Respecto al primero, es la misma cuestion que ya condicion preliminar necesaria. «A lo menos debe
hemos ecsaminado, á saber: si los tres años de es rán haber estudiado teologia, derecho civil ó canó—
tudio son suficientes sin el grado. En cuanto al se— nico por espacio de tres años, ó ser maestro en artes
gundo, la posesion trienal le seria absolutamente in en una universidad famosa». La ordenanza no dice
útil, y no podria invocar el decreto de pacificis po— que los provistos en estos curatos deberán estudiar ó
sessoribus. Seria evidentemente intruso, y no se le hacerse maestros en artes, sino que deberán haber
puede considerar de otro modo sin trastornar el con estudiado y ser maestros en artes. Lo cual supone
cordato, cuyo espíritu y sentido literal igualmente necesariamente que los años de estudio y el grado
eesigen en los curas de las ciudades espresadas estos deben ser anteriores á la provision.
requisitos; lo cual se prueba tambien con la declara No hay cosa mas absoluta que esta espresion: de
cion del año 1736. beran haber estudiado ó ser maestros en artes. ¿Cómo
Aunque no se lee terminantemente en ella esta se podrá conciliar con la jurisprudencia moderna,
decision, se deduce por necesidad. El rey mantiene que no solamente permitiria que los curas de dichas
en cuanto á lo pasado, á los que han adquirido la ciudades se graduasen despues de su provision y to
posesion trienal y á los que no tienen otro defecto ó ma de posesion, sino que ambien trataria de cubrir
incapacidad que la que resulla de la nulidad ó falta la falta de grado con la posesion trienal? Semejanle
de formalidades de sus títulos ó grados obtenidos an jurisprudencia no seria menos opuesta al concordato,
tes de la declaracion. Luego la posesion trienal no que prohibe positivamente el conferir los curatos re
p0dria ser una razon de mantener en su derecho á feridos á personas que no sean calificadas. Non misi
los que carezcan de estos requisitos, porque de otra personis premisso modo qualificatus.;... conferantur,
suerte deberiamos decir que las provisiones de los No se conferirán los curatos de las villas ó ciudades
lales curatos hechas con grados nulos, ó sin las for muradas sino á las personas que tengan los requisi
malidades establecidas no formaban un título cololo tos mencionados. Estas palabras son prohibitivas y
rado, siendo asi que estas mismas provisiones sin equivalen á un decreto irritante ; luego cualquiera
rado podrian serlo; lo cual es un absurdo, porque colacion de un curato de ciudad ó villa murada,
a incapacidad que resulta de la falta de formalidades hecha en una persona que no este graduada, es ra
en el grado, resulta tambien con mayor razon de dicalmente nula segun la intencion del concordalo.
la falta absoluta del mismo grado. Por lo demas, to Por otra parte, es un principio universalmente adop
das estas dudas desaparecerian bien pronto si única tado en Francia, que todas las disposiciones de las
mente nos conformásemos con las leyes que rigen en pragmática sancion, que no han sido derogadas espe
la materia, pues son claras y terminantes. Ecsami cialmente por el concordato, estan en todo su vigor,
nando detenidamente la pragmática sancion, la or por lo cual manifestamos de nuestra inviolable adhe
denanza de 1499, el concordato, y la declaracion sion á este precioso monumento de nuestraslibertades.
de 1551, facilmente convendrémos en que es pre Segun esto, la pragmática sancion contiene un de
ciso ser graduado ó tener tres años de estudios en crelo irritante contra las provisiones de los curatos
teologia, o de derecho en el momento mismo de la referidos que se hayan hecho en sugetos que no esten
provision, y por consecuencia cualquier título de un graduados; el concordato no lo ha derogado; luego
curato de los espresados que se le dé á un presbítero debe ser ejecutada;
que carezca de estos requisitos, es radicalmente nu La declaracion de Enrique ll del año 1551 es tan
lo, y no se puede subsanar con la posesion trienal. terminante como las leyes precedentes, «La univer
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sidad de Paris nos ha representado y espuesto, dice cion, p. 27: «Acaso esta jurisprudencia es de la mis
el rey en el preámbulo, que por los decretos y con ma naturaleza de aquellas que se introducen algunas
cordatos hechos entre la Santa Sede apostólica y el veces en los tribunales en algunas materias delica
difunto rey Francisco de buena memoria...;... en los das, y despues viene á desusarse para volver á las
cuales se contiene espresamente que los beneficios, antiguas reglas». A D“Hericourt reuniremos el pare
curatos ó iglesias parroquiales de las espresadas ciu cer de Vaillant, que sostiene que el grado recibido
dades cercadas y amuralladas de nuestro reino, no despues de la provision no puede cubrir la incapaci
se confieran sino á los que esten graduados y califica dad del provisto, porque si provisus erat inhabilis
dos con los requisitos prevenidos en los dichos santos
tempore provisionis, et posteat fiat habilis, provisio
decretos y concordatos». La universidad solicita que non convalescit, et necesse est abstinere novam provi
los curatos de las ciudades amuralladas no se confie sionem: Rebufo, sobre el párrafo statuimus del con
ran mas que á los graduados. Invoca los santos de cordato, observa que las palabras non misi personis
cretos y concordatos, y refiere tambien las razones pradicto modo ¿ conferantur, suponen visi
que han tenido para establecer esta ley. Porque en blemente el grado obtenido antes de la provision, lo
las ciudades cercadas y cerradas hay mayor afluencia mismo qne aquellas de que se sirve la pragmática:
de pueblo, para cuyo gobierno é instruccion, y conser instituantnr persona qui gradum magisterii adepti
varlo y mantenerlo en la religion, es preciso que en fuerint. Lauet y Dumoulin son de la misma opinion;
ellas se pongan sugetos graduados, etc.; estas adver por lo mismo es creible que la jurisprudencia moder
tencias no suponen que podian ser provistos en esta ha, que se supone opuesta á estos principios, no es
especie de curatos los no graduados ó calificados, ni tan cierta como pretenden algunos autores ; los de
que puedan eximirse del grado, apelando á la pose CrelOS ¿ las verdaderas máximas no son
sion trienal. y aun lo que es mas, se dirigen á impe porlo regular sino decretos de circunstancias; siem
dir que el papa dispense los grados, y el legislador pre hay que acudir á la ley, aun cuando se aparten
decide que son absolutamente necesarios, mandando de ella alguna vez:
que no se tenga consideracion alguna con las impetra El parlamento de Tolosa tiene una jurisprudencia,
ciones que hagan los que no esten graduados, ó no ten que al parecer destruye los principios que hemos es
gan los requisitos prevenidos en dichos concordatos. La tablecido; pero sus decretos favorecen en el fondo
provision de un curato de los referidos, hecha por el nuestra opinion: solo habla de las provisiones de la
papa en los que no esten graduados, es radicalmente corte de Roma, como simples mandatos de providen
nula: ¿por qué la que se haga por el ordinario no lo do. Segun la misma jurisprudencia , las testimoniales
deberá ser tambien? ¿acaso los concordatos no le obli forman, por decirlo asi, la verdadera provision; asi,
gan mas que al papa? No es este uno de aquellos ca permitiéndole al provisto la corte de Roma que reci
sos en que los derechos del ordinario son más favora ba su grado antes de tener las testimoniales, no por
bles que los del soberano pontífice ; la ley no se ha eso cree que estos grados se pueden recibir despues
hecho con el fin de sostener la jurisdicion episcopal, de la provision. - - -

sino para el beneficio de los pueblos. La razon essiem Despues de haber examinado el origen; antigüedad
pre la misma, bien sea que la provision dimane del y requisitos necesarios en los curas, hablaremos de
papa ó del ordinario: si hace nulas las provisiones del sus obligaciones y prerogativas. No vamos á tratar
¿ , debe suceder lo mismo con las del ordinario. aqui de las obligaciones pertenecientes al foro inter
El grado es sin duda una capacidad esencial al que no, por ser esta materia mas propia de los teólogos
haya de ser cura en una ciudad cercada. Es asi que y moralistas; y así solo trataremos de las que siendo
es un principio que la falta de capacidad esencial ha prescritas por las leyes civiles y canónicas, pertene
ce que el título sea radicalmente nulo, y que un título cen realmente al jurisconsulto. Entre sus principales
radicalmente nulo no puede ser revalidado con la po— obligacienes, es sin duda una de las mas esenciales
sesion trienal, de lo cual sacaremos dos consecuencias. la residencia. La relajacion y las variaciones intro
La primera que el decreto de pacificis no puede ser ducidas en la disciplina han obligado á la Iglesia á
de ningun modo util á los caras de una ciudad mura dar leyes para hacer que residan en sus beneficios
da que no esten graduados: la segunda que no se le los párrocos y sus segundos ó tenientes. Es inutil re
puede permitir tomar el grado, posteriormente á su ferir los cánones que hay en los concilios sobre este
título, porque siendo nulo radicalmente , no puede punto. - ---

llegará ser legítimo segun el axioma quod ab initio Nos contentaremos con citar el concilio de Trento
nullum est, ex post facto convalescere nequit. Es muy en su sesion 23 De reformatione, c. 1.”, donde su—
cierto que ateniéndose á la la ley sin tratar de hacer jeta á los curas no residentes á las mismas penas que
interpretaciones, que son casi siempre arbitrarias, el tienen los obispos, á saber: la pérdida de los frutos,
cura que sea nombrado para las ciudades ya referi á proporcion del tiempo que hayan dejado de residir.
das debe tener el grado al momento mismo de su pro Nóles permite ausentarse mas que dos meses, aun
vision; que no se le permite adquirirle antes ó des— que sea con licencia del obispo, el cual no puede
pues de la toma de posesion, y que este defecto no se concederla por mas tier po, á menos que tenga gran
puede suplir con la posesion trienal. Siguiendo estos des razones para ello: misi ca, qrari causa. Si al
principios en la práctica, se devanecerian una por gun cura quebrantase esta ley, manda el concilio que
cion de dificultades queson el origen de una infinidad se le haga comparecer, y si no , quieles obedecer,
de litigios. - pueda proceder el ordinario contra él, secuestrán
Si oponemos á esto la autoridad de la cosa juzgada,dole y sustrayéndole los frutos, y usando de todos
permílasenos decir con D“Ilericourt en la última edi los medios que tiene por derecho, aunque sea pri
 CUR 58% CUR
vándole del beneficio. Nuestros reyes han adoptado sustitutos de ellos. Seran sumariados á pedimento de
esta sabia disposicion. La ordenanza de Blois en el nuestros procuradores generales ó sustitutos de estos.
art. 1"; dice: «Los curas, y cualquiera otro que ten— El art. 23 del edicto de 1695, no es tan imperativo;
ga cura de almas, estan obligados á esta residencia y solo parece que concede una simple facultad á los jue
bajo la misma pena, sin que se puedan ausentar, á ces reales sin atribnirles una jurisdicion esclusiva.
no ser con causa legítima, á juicio del obispo dioce «Nuestras audiencias, nuestros jueces ordinarios y se
sano, á quien tienen que pedir la licencia ó permiso nescales ... podrán reconvenirles... nuestras referidas
por escrito, el cual se lo concederá y despachará gra audiencias, nuestros jueces ordinarios y senescales
tis, sin que pueda esceder la referida licencia del podrán á pedimento de los procuradores generales».
término de dos meses, sino hay graves razones para Esta palabra podran, usada dos veces en este artí
ello». El art. 2.º de la ordenanza de 1629 corrobora culo, prueba que la intencion del legislador no es des
la de Blois en estos términos: «Los curas tienen que pojar á los obispos de una jurisdicion que trae su
residir en persona en sus pueblos, aunque esten pró— origen naturalmente del derecho de vigilancia é ins—
ximos á las ciudades; y no haciéndolo, manda S.M., peccion, sino que solamente los hace mas cuidadosos
en consecuencia del art. 1 de la ordenanza de Blois, y vigilantes, juntamente con los procuradores gene
y art. 7 del edicto de Melun, se les embarguen los rales y personas depuladas por ellos para que vigilen
frutos de los referidos curatos, aplicándolos á los hos la ejecucion de las leyes sobre la residencia, de suer—
pitales del pueblo inmediato, segun el tiempo que ha te que en este caso ejercen los jueces reales sobre los
yan faltado á la residencia. Seran notificados á pedi eclesiásticos una jurisdicion cumulativa (1) con los
mento de los procuradores generales ó los sustitutos obispos y sus provisores. Por otra parte las penas
de estos, requiriéndoles en los domicilios y pueblos impuestas contra la residencia son de tal naturaleza
de sus beneficios á que cumplan la residencia; y sino que pueden ser aplicadas por el juez eclesiástico. La
lo verificasen dentro de un mes poco mas ó menos, se privacion de las rentas y destitucion de los beneficios
gun la distancia de los pueblos, se proceda al referi son las penas canónicas que puede imponer el provi
do embargo». sor; pero tiene que observar todas las formalidades
Conoció el clero que estas leyes le ponian bajo la prescritas por las leyes del reino.
influencia inmediata de los tribunales seculares, y se Si los curas deben residir es con el fin de adminis
quejó pidiendo que se revocasen; pero solo consiguie trar principalmente los sacramentos á sus feligreses.
ron que se modificasen por el art. 33 del edicto del Rntre los sacramentos hay dos especialmente que in—
año 1695; y esla modificacion fue causa de que rara teresan al jurisconsulto por la influencia que tienen
vez se les ocupasen las rentas del curato por causa de en el estado civil de las personas. Si el bautismo es
ausencia á pedimento del procurador general. Para la entrada en el cristianismo, el acta que le certifica
no anticipar las materias invirtiendo el orden que nos es tambien el primer título de pertenencia que tene—
hemos prescrito, no hablaremos mas de estas orde mos en la sociedad. Los curas deben tener mucho cui
nanzas, reservándonos hacerlo cuando tratemos de la dado en que esta acta se estienda en forma y no tenga
residencia en general, pues ahora solo hablamos de vicio alguno que pueda dar ocasion de duda sobre el
la que mira á los curas en particular. estado que la naturaleza le dió al bautizado, pero que
Segun el concilio deTrento y la ordenanza de Blois la ley no se lo asegura sino despues de certificado por
el obispo es el juez legítimo de las causas que puede el ministro del altar, que en aquel acto es tambien
tener un cura para ausentarse. El consejo de Estado ministro de la sociedad. Los curas deberan poner mu
. en 12 de diciembre de 1639, dispuso, á peticion del cho cuidado en este asunto para evitar las consecuen
arzobispo de Burdeos, que los curas de aquella dió— cias de un error que puede ser falal, conformándose
cesis no pudiesen dispensarse de la residencia actual, esaclamente con las leyes que se han prescrito y re
cualquiera que fuese la causa ó motivo que tuviesen, ferimos en la palabra RegisrRo.
sin el permiso espreso y por escrito del arzobispo ó El sacramento del matrimonio, en cuanto á sus
de sus provisores. Aunque el obispo es el juez legítimo efectos civiles, es de tanta importancia como el del
de las causas que esponen los curas de su diócesis, no bautismo. El conocimiento perfecto de las leyes ecle—
puede, sin embargo, negar arbitrariamente dichoper siásticas y civiles es el único medio de que un cura se
miso, que estan obligados á pedirle, porque la misma pa conducirse en este punto para no incurrir en los
ley que impone á los curas la obligacion de solicitarlo castigos impuestos á los infractores. Debe informarse
por sí mismos, manda positivamente á este que se lo especialmente de la edad y domicilio de los contra
conceda cuandono haya motivos justos para rehusarlo; yentes, porque seria culpable sicasase algunos meno
y si se condujura de otra manera se espondría á una res sin consentimiento de sus padres, tutores ó curado
apelacion bien fundada, ya sea simpleó como de un res, y tambien cometeria una grave falta si uniese en
abuso. Pero en el caso de una ausencia considerable matrimonio á los que no estan domiciliados seis meses
hecha sin permiso, ¿puede procesar el obispo á un antes en su parroquia, siendo de la diócesis, ó por
cura por medio de su provisorº En donde se aceptó espacio de un año si son de otra cualquiera; pero no
el concilio de Trento no hay dificultal alguna en ello; tendria escusa ninguna si prestándose al rapto y á la
pero como sus disciplina no está recibida en Francia, seduccion emplease su ministerio sagrado en favore
podemos decir que el espíritu de nuestras ordenanzas cerlos cuando la ley los castiga con pena de muerte.
es de que los jueces reales son los que le deben pro
cesar en este caso. La de 1629 manda que se hagan C. S” (1), Bien pudiera llanarse por lo menos oficiosa
las diligencias contra los curas que faltan á la resi cuando no invasiva; porque ciertamente no es la potestad civil
la ada
de vigilar sobre las obligaciones y deberes del sa
dencia, á pºlicion de los procuradores generales ó CertJ0 (10.
 CUR 585) CUR
El art. 39 de la ordenanza de 1629 «prohibe á to edictos que los curas no pudiesen sin su aproba
dos los curas y demas presbíteros seculares ó regula cion por escrito delegará otros esplicar el ca-,
res, bajo la pena de una multa arbitraria; que cele tecismo, para las oraciones de la tarde, y las ins
bren matrimonio alguno de los que no sean sus feli trucciones familiares, y los curas de dicha ciudad
greses sin permiso de sus curas ú obispos; y quiere apelaron de estas providencias como un abuso, y se
que los jueces eclesiásticos juzguen las referidas cau— resolvió por sentencia de 9 de marzo de 1756 que no
sus matrimoniales conforme á este artículo». tuviesen ejecucion. La razon que dieron los curas fue
El edicto del mes de marzo de 1697 añade á esta la de que los catecismos, las oraciones de la tar—
disposicion lo siguiente: «mandamos que si alguno de, las pláticas y demas instrucciones familiares no
de los referidos curas ó presbíteros, tanto seculares estaban comprendidas en los artículos 10 y 11 del
como regulares, celebrasen en adelante á sabiendas ediclo de 1695. Pero si los curas no pueden delegar
y con conocimiento algun matrimonio entre personas sus facultades en otros presbíteros para que les ayu
que no sean electivamente de su parroquia; sin tener den en la administracion del sacramento de la peni
permiso por escrito de los párrocos de los contrayen tencia, ¿podrá el obispo obligarlos á tomar¿ vica
tes, ó del arzobispo ú obispo diocesano, se proceda rios algunos sugelos que no quieran, ó podrá nom—
contra ellos estraordinariamente, y que además de las brarlos intito parrocho? Es indudable que el bien
penas canónicas que los jueces eclesiásticos les impon de la Iglesia, no se puede conseguir, si los ministros
gan, sean privados los referidos párrocos y presbíteros, del altar no lo procuran, guardando buena armonia,
tanto seculares como regulares, que tengan beneficios y estando animados de un mismo espíritu. Esla sola
por la primera vez del goce de todas las rentas de sus razon, deducida del bien general, es la que debe de
curatos y beneficios por espacio de tres años, reser— cidir la cuestion. Nunca estará bien gobernada una
vando solo lo que necesiten absolutamente para su sub parroquia si el cura y el vicario no estan unidos con
sistencia, sin quepueda esceder la suma de seiscientas los vínculos de la confianza, de la estinacion y amis
libras en las ciudades mas grandes, y la de trescien tad; si no trabajan de concierto; si no lienen las mísmas
las libras en cualquiera otra parte, y que se embar— miras, y se ponen de acuerdo sobre los medios que
gue el sobrante de dichas rentas á peticion de nues han de emplear para conseguirlo. Luego no se le de
tros procuradores, y se distribuya en obras pias bajo be al párroco dar un vicario que considere como su
la direccion del arzobispo ú obispo diocesano, el que én enemigo, ó delator y espia de sus operaciones, si es
el caso de una segunda contravencion se les destierre contra su eleccion y voluntad.
por el tiempo de nueve años de los pueblos que nues Y asi, por derecho comun un cura es árbitro en
tros jueces estimen á propósito.... y que los referidos elegir sus vicarios. Se habia ordenado de subdiácono
curas y presbíteros puedan ser asis con mayores el hijo de un presbítero, y su obispo no quiso ascen
penas en el caso de rapto hecho con violencia, si aca— derlo al sacerdocio, ni confiarle la administracion de
S0 prestasen su ministerio para celebrar el matrimo— un curato que le habia presenlado un patrono lego.
nio en aquel estado». No nos estenderemos mas sobre Alejandro Ill, á quien se quejó el subdiacono, man
este asunto, porque en la palabra MATRIMoNio se en— dó que el obispo pusiese para servir el curato, de
contrará lo que se pueda echar de menos aqui. acuerdo con el subdiácono, un presbítero con el cual
Los curas, como hemos dicho, ya tenian antigua repartiese la renta. La consecuencia natural de este
mente lacultades para delegar presbíteros que pudie decreto del papa es, que si para servir un curato era
sen confesar á sus feligreses; es decir, que ellos mis necesario el consentimiento de un titular, aunque no
mos p0dian elegir vicarios ó tenientes sin necesidad fuese presbítero, con mucha mayor razon será nece
de otra licencia que las que ellos les concedian. El sario el de un verdadero cura párroco para asociarle
concilio de Trento en la sesion 23 De reformatione un cooperador.
introdujo un derecho nuevo en este punto mandando Los concilios dejan siempre á los curas la libertad
que solo los curas ó presbíteros aprobados por el obis de elegir un vicario, bien sea durante su ausencia, ó
popuedan confesar, no obstante cualquier privilegio porque tengan necesidad de él para que les ayude.
0 costumbre contraria, aunque sea inmemorial. Asi lo suponen evidentemente el de Vicheler de l
El edicto de 1695 adopl6 esta disposicion, man año 1210, en el canon 26; el de Cognac del año 1226,
dando en los artículos 10 y 11 que nadie pueda pre en el canon 10; el de Chichester del año 1289, en el
dicar y confesar, á no ser con aprobacion del obispo, cánon 8; el de Salsburgo de 120, en el cánon 5: los
sin esceptuar de esta prohibicion mas que á los curas de Colonia de 1536, de Maguncia de 1549, de Cam
párrocos y otros beneficiados con cargó de almas; y bray de 1565 dicen lo mismo espresamente. El con
asi es una ley general y establecida por las dos potes cilio de Trento impone á los curas la obligacion, en la
tades que los curas párrocos no pueden dar licencias sesion 23, cap. 1, de que nombren en su lugar vica
de predicar y confesar en sus iglesias; pero sí pue rios capaces y aprobados por el obispo cuando tienen
den delegar todavia sus facultades para administrar que ausentarse con causa legítima. En la sesion 21,
los sacramentos dei bautismo y del matrimonio, y cap. 4, manda á los obispos que obliguen á los curas
han conservado ademas el derecho de mandar espli á que se asocien otros presbíteros, los que sean nece—
car las instrucciones familiares que hacen á sus feli sarios para la administracion de los sacramentos y la
greses por medio de las personas que les parece. El celebracion del culto divino. Si el concilio hubiera
edicto de 1695, como no habla mas que de la de pre imaginado que los obispos tenian derecho á ponerles
dicar y confesar, se colige por razon natural que no vicarios contra su voluntad, hubiera usado de un len
ha coarlado á los curas las facultades que gozaban guaje muy diferente,
anteriormente. El obispo de Auxerre dispuso en dos Estas autoridades son las que determinaron á los
 CUR 586) CUR
canonistas, como Pirring en el l. 1, tít. 28, de of contra su voluntad, los curas ¿ su parte tampoco
ciº picarii, y Fagnano en el cap. consultationibus, ti
tulo de clerico uegroto, á decidir que los curas podian los pueden elegir sin permiso de los obispos, porque
son los que conceden la licencia necesaria para ello.
elegir sus vicarios, y á estos se puede reunir. Van— El nombramiento de un vicario que se hiciese spreto
Espen en la parte primera. (tít.3, cap. 2, n. 2.) parrocho, cuando el cura propone al obispo sugetos
Buchei, uno de nuestros autores mas antiguos, ha se capaces y de suficiencia, seria un abuso y un verdadero
guido esta opinion, y Rebufo en su práctica, a titulo esceso de su autoridad, cuyo fin podia ser el despojar
de dispensatione de non residentibus, afirma que en su sin razon al cura del derecho que le asiste como ál;
tiempo era la costumbre general de reino. pero tambien si un cura rehusase obstinadamente el
Nuestras ordenanzas no han hecho mas que repe— recibir de manos del obispo un vicario, si obstinán
lir sobre este asunto, por decirlo asi, las decisiones dose en pedir por cooperador suyo á un sugeto que
de los concilios. En todas partes mandan á los cas tuviese algunas nulidades bien conocidas, ponia á sus
ausentes que nombren vicarios capaces y aprobados feligreses en el caso de que les faltasen los socorros
Por el ordinario. Asi lo dispone precisamente el ar espirituales, que debe darles por sí mismo ó por otro,
culo 5 de la de Orleans, y la declaracion de 1562, entonces el obispo podrá nombrar un vicario; y este
hecha á peticion del clero. La cámara eclesiástica de nombramiento, necesario en las circunstancias, se
los estados del reino reunidos en 161, pidió que los sostendria apesar de las reclamaciones del cura, el
curas que,se hallasen ausentes y legímamente dis cual se halla en el caso de un colador ordinario, que
Pensados de residir por alguna causa justa pusiesen se descuidó en el nombramiento de un benefició ó
en su lugar un vicario idóneo, contando con el benenombró una persona incapaz, por lo cual perdió su
plácito del ordinario y su espresa aprobacion. En fin,
derecho por esta vez y pasa jure devolutionis á las
ºlar 99 de los usos de Paris prueba que los curas manos de su superior: lo cual será unjusto castigo de
han elegido siempre sus vicarios, y que antiguamen su capricho. No debemos jamas perder de vista, que
te les daban título de vicariato. No concede á los si los superiores por su parte no deben esceder los
Vicarios la facultad de recibir testamentos, no el límites de sus facultades, tampoco los inferiores pue
niendo título de vicariato de sus curas, y no habién den usar de sus derechos sino conforme á la razon y
dolos hecho registrar en el archivo de la jurisdicion á las leves. - -

de su domicilio. Es ¿, que escepto el obispo diocesano, en toda

los ribunales soberanos han adoptado la opinion la estencion de su diócesis es siempre el primer pas—
favorable á los curas, confirmándola con sus provi— tor, nadie puede sin permiso del cura celebrar misa
dencias. Chenu en su coleccion de reglamentos (lít. 1, en su iglesia, predicar, ni ejercer las demas funcio
ºp., 12), refiere uno del parlamento de Paris de 1567, nes del santo ministerio. De aquí no se saca la con
en el que se manda al cura de Lonjumeau, que pon secuencia de que pueda impedir á un sacerdote apro—
¿ ºsº ausencia un vicario, que sea de buenavi bado por el obispó el decir misa solo por su capricho,
º, doctrina y ejemplo. Otro se encuentra en Chopin,
de sacra politia, edicion de 1585, el cual confirma yuia,sin razon. Creemos que si es natural de la parro
no puede sin motivos y bajo su responsabili
una sentencia del provisor de París, en la que se le ¿ separarle del altar, porque eso seria lo mis
¿? al cura de S. Benito, que nombrara un pres mo que pronunciar contra él una especie de entre
ºrº aprobado por el ordinario para que sirviese la dicho, que le deshonraria é infamaria, y en este ¿I
iglesia de Santiago del Haut-Pas , que era entonces so podria proceder contra el cura en justicia. Conclu
sufragánea ó anejo de su parroquia; y se hallan otros yamos, pues, diciendo: que un cura no es un ¿
Varios hechos en el mismo sentido, Los parlamentos ia en su parroquia, asi como el obispo tampoco lo
de Rennes, de Tolosa y de Aix siguen la misma ju debe ser en su diócesis. Tanto uno como, otro, de
risprudencia , sin embargo, es necesario COnvenir ben obrar solo atendiendo al bien de los fieles confia
que ninguno de estos decretos se han dado por liti dos á su cuidado; y si procuran cuidar de la conser
gio movido entre un obispo y un cura; solo por una vacion de sus derechos, no estan menos obligados á
induccion muy fuerte, á la verdad, se les mira comº abstenerse de todo cuanto pueda perjudicará sus in—
decisivos en favor de los curas. La cuesto se pre feriores cuando no son dignos de reprension. Sin du
sentó in terminis en 1331 en el parlamento de París. da con este motivo se dió en el parlamento de Paris
El cura de la parroquia de Gaus apeló reclamando la sentencia de 1 de julio de 1700, por la cual se les
el abuso de nombramiento de un vicario , que el se mantuvo en el ejercicio de su autoridad, á pesar del
ñor obispo de Chartres habia hecho sins COnsenti cura, á dos presbíteros asignados en S. Roque, y
miento. Mr. Gilberto de voisins, abogado general, aprobados por el arzobispo para confesar, celebrar
Se pronunció al instante contra el obispo, pidiendo y asistir al coro, tomando asiento en las sillas etian
que se declarase el nombramiento como un abuso; invito parroco, Goard, en el t. 1 de su Tratado de
pero algunas consideraciones particulares determina Beneficios, p. 755, asegura que fue dada sin citacion
ºn al ribunalá señalar la vista de la causa, y no
llegó á sentenciarse.
en ausencia del cura, que estaba desterrado de or
Las circunstancias debieron tener mucha influen "¿n los curas en virtud de su título confesar
la en el fallo de semejante litigio. El derecho que en toda la diócesis, y el obispo restringir esta licen
tienen los curas para ¿ sus vicarios, es sin duda
cia, limitándola solamente á su parroquia y á sus e
incontestable, tanto mascuanto no perjudica en na ligreses? Los principios estan contra esta pretension
da á la subordinacion que se debe á ¿ obispos. Si de los curas; en efecto, aunque han recibido, lo
estos no pueden obligará los curas á aceplar vicarios mismo que todo presbítero, en su ordenacion la fa
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cultad de atar y desatar, debemos sin embargo con de que el art. del edicto de 1695, que prohibe á los
venir en que está suspensa en cuanto al ejercicio, curas confesar fuera de sus parroquías sin el consen
segun las leyes canónicas; y asi, para ponerla en timiento del obispo, les permite confesar en sus igle
uso fuera de los casos de necesidad, es preciso que sias á otros feligreses que se dirigen á ellos solo con
la lglesia les asigne las personas, demarcándoles la el permiso de su cura. El circunscribir un territorio
jurisdicion, lo cual se hace por el ministerio del obis á un tribunal cualquiera es lo mismo que limilar su
po cuando le dá á un presbitero el título de un cura jurisdicion á los habitantes de aquel territorio, y es
to, óle concede la institucion. La potestad de atar to es lo que hace el edicto de 1695 diciendo que los
à desalar suspendída relativamente á todos los fieles, Cll TaS an confesar en sus parroquias sin aproba
eja de estarlo con respecto á los que le son confiados; cion del obispo. Su territorio está limitado, y como
ciertamente, con las testimoniales ó título de institu— sus funciones se ejercen sobre las personas, hubiera
cion, el obispo solo le asigna las personas que hay en sido inutil limitar sus facultades á sus parroquias, si
la estension de su parroquia. Lacombe en su colec— por parroquia no se entendieran los feligreses. El ar
cion de Jurisprudencia canónica, en la palabra con— gumento que emplea Gibert no nos parece que sea
fesor, no tiene razon en decir que así como un concluyente. Los curas pueden, segun él dice, confe
resbítero, que tiene una aprobacíon general y sin sar a los feligreses de otros con su permiso, lo mismo
imitacion, puede confesar en todas las diócesis, lo que pueden asistir al matrimonio de los feligreses de
mismo el cura puede confesar en todas partes con solo otros, si estos se lo permiten. Tampoco es esacta la
su título. Las testimoniales no son mas que un título comparacion; los curas estan en posesion de poder
particular, limitado por su naturaleza, pues si fuera delegar á otros para administrar el sacramento del
de otra suerte, podriamos decir que un cura no solo matrimonio y no para el de la penitencia; y si no
lo seria de su parroquia, sino de todas las de la dió pueden delegar para la confesion en su propia par
cesis, supuesto que en virtud de su título podria ejer roquia, ¿cómo podrán hacerlo en las de los olros?
cer en todas partes una de las principales funciones Por otra parte la razon de que las luces y talento de
parroquiales; es tambien un error el pretender, los curas deben ser proporcionados al estado de aque
como lo hace el mismo autor, ¿ el obispo, aproban llas personas que confiesan, se presenta aqui en to
do á un cura por las lestimoniales ó el título, lo res da su fuerza; si no es conveniente que un cura de la
tituya en sus antiguos derechos, que son indefini aldea, por ejemplo, pueda sin aprobacion de su
dos en su diócesis. Las personas asignadas al cura obispo administrar la penitencia en una ciudad, por
en su título son únicamente las de parroquia donde e la capacidad que se requiere para esta debe ser
le han nombrado, y solo sobre ella adquiere la po— iversa de la que se requiere para una aldea ;, esta
testad. En las diócesis en donde los curas tienen cos misma razon impide que el cura del campo pueda sin
tumbre de confesar indistintamente por todas partes, aprobacion confesar los habitantes de la ciudad,
los obispos la aprueban con su consentimiento tácito, aunque vengan á buscarlo á su parroquia, porque no
º esta tácita aprobacion toman su fuerza y valor
as absoluciones.
hay diferencia alguna entre confesarlos en la ciudad
ó en la aldea. En fin, para que un cura confiese los
El obispo puede hacer que los curas no confiesen feligreses de otra parroquia, ha de ser en virtud de
fuera de su parroquia, limitándolosal término de ella. su iítulo ó en la del consentimiento de su propio cura.
San Cárlos Borromeo, en su sínodo undécimo manda, No puede ser en virtud de su título, porque no le da
que los curas de las ciudades no puedan llamar á los facultades sino sobre sus feligreses, ni en virtud del
de las aldeas para que los ayuden en el tribunal de consentimiento de su propio cura, porque no puede
la penitencia, á no ser que tengan licencia por es— delegarle para esto. Luego los curas no pueden con
crito para confesar fuera de los límites de su parro fesar á los feligreses de otra parroquia, sin la aproba
cion tácita ó espresa del obispo.
quia. La congregacion de cardenales ha decidido que
los curas son aprobados el pueblo en que está No pasaremos en silencio que hay muchos autores
situada su parroquia, y de ningun modo lo son in en contra de la opinion propuesta. Nos ha parecido
distintamente para toda la diócesis. mas conforme á los principios; y hemos pesado mas
El art. 12 del edicto de 1695 dice asi : «¿No en bien las razones que las autoridades; y nos imagina
tendemos sean comprendidos en los artículos antece— mos que se acerca mas al espíritu de nuestra juris
dentes los curas seculares y regulares que pueden prudencia ; y el resustado del pleito que se suscitó
predicar y administrar el sacramento de la penitencia en el año 1737 entre Mr. de Saleon obispo de Rodez,
en sus parroquias.» Esta última espresion en sus par y el señor de Brilland cura de la catedral de la mis
roquias decide la cuestion, y segun Gibert, en su con— ma, nos ha confirmado en nuestro parecer. El señor
ferencia sobre este edicto, no hay duda que los curas obispo de Rodez le mandó por escrito que no confe.
no pueden confesar fuera de su parroquia, sin la apro sase á otras personas que á sus feligreses, so pena de
bacion ó permiso de sus obispos. Este canonista des nulidad. El cura apeló reclamando el abuso de este
truye el fundamento de la opinion contraria, que dice mandamiento, y aun consiguió del parlamento de
que, siendo aprobado cualquiera para confesar, puede Tolosa permiso para intimar al obispo que no le inco
hacerlo en todas partes, observando con razon que modase en el particular, aunque el art. 3 del edicto
aquellos cuyas luces y talentos son suficientes para go— de 1695 lo prohihe espresamente en todo aquello que
bernar y dirigir á los aldeanos, no serian muy conve pertenece á la jurisdicion voluntaria. El prelado acu
nientes acaso para confesar en una ciudad. dió al consejo real, y logró en 1% de marzo de 170
Pero nos parece que se engaña y no guarda conse un decreto confirmando su mandamienlo y declarando
cuencia con lo que dice él mismo, cuando preten la apelacion del cura como un abuso, el cual se halla
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en la memoria que dirigieron los agentes generales son los que hacen los entierros ó inhumaciones, y aun
del clero á la asamblea de aquel año. Es verdad que tambien las de las pensionistas que fallecen dentro:
no fue contradictorio, porque el señor de Brilland mas no sucede asi con las que estan sujetas al ordina
habia muerto mientras se siguió la instancia; sola— rio. El cura puede ejercer en ellos los derechos parro
mente lo fue en su defecto contra otro cura inmedia— ¿ y hacer las inhumaciones; las pensionistas se
to á él que se hallaba en el mismo caso. Aunque no eben enterrar en la parroquia, porque el decir que
tenga los caracteres necesarios para que se considere los curas violarian la clausura, administrando á las
la cosa como juzgada, sin embargo, es cono una enfermas, seria una objecion débil, puesto qne los
especie de juicio provisional favorable á la opinion capellanes la violarian igualmente. Y por otra parte,
que defendemos, porque el rey prometió entonces á ¿es acaso violar la claura el entrar en un monasterio
los obispos las mismas nuestras de proteccion, siem cuando se hace con un motivo y una necesidad tan
pre que la conducta de los curas los pusiese en el caso urgente como es la administración de los sacramen
y necesidad de reclamarla. Por lo deinas, en las dió— los?. Pero será prudente que el cura delegue estas
cesis en donde hay costumbre que los curas confiesen funciones en el capellan de la comunidad, con lo cual
indistintamente á sus feligreses y á los de sus com vigila sobre la conservacion de sus derechos, y atien
pañeros, previo su consentimiento, las absoluciones de á la tranquilidad del monasterio al mismo tiempo.
son buenas y válidas, porque la costumbre autoriza— Es de observar que los curas necesitan tambien una
da por el siencio de los obispos vale lo mismo que licencia especial del obispo para administrar el sa
una aprobacion especial; y si tienen facultades para cramento de la penitencia á las religiosas; tan cierto
derogarla, no han querido ejercer este dereche, ni es que un simple título ó aprobacion no es tan gene—
deben usar de él sino con mucha circunspeccion, y ral que quile las trabas que la Iglesia ha puesto al
cuando haya algun motivo poderoso. ejercicio de la potestad que reciben los presbíteros en
El autor del diccionario del derecho canónico re su ordenacion. -

fiere en la palabra MisioN varias providencias del Ilay algunos monasterios de religiosos que ejercen
consejo de Estado que se dirigen á mantener á los las funciones parroquiales y administran los sacra
obispos en el derecho de mandar misiones á las par mentos á sus arrendatarios, á sus criados y á todos
rCquias de sus diócesis sin conocimiento de los curas. cuantos habitan dentro del recinto y en los patios ó
Observaremos al paso que una mision, si el cura no corrales de ellos. Es un privilegio concedido á la Or
cooperase, o acaso se opusiese, no podria facilmente den del Cister sostenido por varios decretos y que con
producir el fruto que la Iglesia desea, por lo cual un firma los principios que hemos establecido.
obispo rara vez deberá enviar misioneros, sin contar Los curas han gozado en Francia como ministros
con los pastores ordinarios, porque es uno de aquellos tanta consideracion en el Estado como en la religion,
derechos de que es preciso usar con prudencia y cir y asi podian olorgar testamentos antiguamente en
cunspeccion. Si se presentase alguna reclamacion en concurrencia con los notarios y demas oficiales públi—
los parlamentos, podria suceder que se resolviese se cos. En el art. 289 de las costumbres de Paris se les
gun las circunsancias. El silencio del edicto de 1695 autoriza del modo siguiente: «Para reputar como so—
acerca de este punto parece que da margen á ello, y lemne un testamento se requiere que esté escrito y
así lo insinúa Gibert en su conferencia sobre el art rubricado de mano del testador, ó que esté autoriza
culo 10 del mismo edicto. do, por dos notarios, o ante el cura párroco del tes
¿Deberán esceptuarse de la regla general á que lador, o su vicario general y un notario, ó del referido
estan sujetos todos los fieles relativamente á los curas, cura ó vicario y tres testigos». Y el art. 291 añade:
los monasterios de religiosos y religiosas? Los religio «los releridos curas y vicarios generales tendrán que
sos eslan en costumbre de ad ministrarse los sacra — poner y anotar de tres en tres meses en los archivos,
mentos entre sí sin la aprobacion de los obispos y como se ha dicho arriba, los registros de bautismos,
sin recurrir á los curas, y seria , dificil combatirla,matrimonios, testamentos y sepulturas bajo su cuen
porque la Iglesia parece que ha dado á los superio la y riesgo, y sin tener que pagar nada en el ar—
res de cada monasterio una autoridad general para chivo». -

confesar y administrar á sus religiosos; pero no suce El reglamento de los testamentos de 31 de agosto
de lo mismo con sus criados y demas seculares que de 1735 se esplica asi en el art. 25. «Los curas se
habiten con ellos; no hay razon que les dispense de culares ó regulares podrán otorgar los testamentos ú
los deberes parroquiales, y es seguro que solo el cura otras disposiciones por causa de muerte en los límites
liene facultades para confesarlos, administrarles el de sus parroquias, solamente en los pueblos donde
viático, y hacerles el entierro. Hay en Lacombe un las costumbres y estatutos los autoricen espresamente
decreto del parlamento de Bretaña de 1672, que lo para ello, y acompañándose de dos testigos, lo cual
decidió asi en favor del cura de San Paterno en Van será igualmente permitido á los presbíteros seculares
nes contra los dominicos de aquella misma ciudad. puestos por el obispo para servir los curatos, mien—
En cuanto á los monasterios de religiosas ocurre tras que los sirvan, sin que los vicarios y demas per
mayor dificultad. En general todo cuanto es esterior sonas eclesiásticas puedan antorizar testamentos ni
á la clausura, todo aquel que no habita en lo interior otra especie de última voluntad. No tratamos de inno
de la casa no puede sustraerse de la jurisdicion del vºr nada en los reglamentos y usos observados en
párraco ordinario. En cuanto al interior de los mo algunos hospitales respecto á los que pueden autori
masterios, hay que distinguir los que son esentos de zar testamentos». El art. 26 continúa: «el cura ó
los que no lo son. Los monasterios esentos reciben ecónomo tendrán inmediatamente despues de la muer
los sacramentos de mano de sus capellanes, y ellos te del testador, sino no lo hiciesen antes, que depositar
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el testamento ú otra cualquiera disposicion que hayan nuncia él mismo sin una forma jurídica, y otras que
autorizado, en casa del nolario ó escribano del pue tiene que imponerlas despues de un informe en e—
blo; y sino lo hubiese en él, en casa del notario real ¿y un procedimiento legal. Los obispos no pue
que haya mas inmediato en la jurisdicion ó senesca en pronunciar por sí mismos estas últimas porque
lia donde está situada la parroquia, sin que los refe— estan reservadas únicamente á su provisor, por lo
ridos curas ó ecónomonos puedan sacar copia alguna que no trataremos de ellas. Entre las primeras, la
so pena de nulidad de las referidas copias y de los mas comun es la de enviarlos al seminario por algun
daños y perjuicios de los notarios ó escribanos y de tiempo. Nuestros reyes han creido digno de su aten
las partes interesadas». cion el poner límites á esta facultad de los obispºs
Estos dos artículos han derogado el derecho anti con el fin de que los curas no estuviesen espuestos á
guo en tres cosas: 1.º, han quitado á los vicarios el vejaciones y á actos de despotismo, bajo el especioso
derecho de autorizar los testamentos; 2.", este dere pretesto de conservar la disciplina. Una declaracion
cho, en cuanto á los curas mismos, está ceñido y li. del 15 de diciembre de 1698, registrada en todos los
mitado á los pueblos donde las costumbres y estatutos tribunales, dice: « que los reglamentos por los cua
los autorizan espresamente para ello; 3,", tienen que les hayan estimado necesario los obispos el mandar
depositar los testamentos que han autorizado en casa retirar á los curas ú otros eclesiásticos con cargo de
del escribano del pueblo ó del notario real mas inme— almas, durante la visita, despues de formada la su -
diato sin sacar ninguna copia: el artículo 33 del mismo maria á los seminarios por tiempo de tres meses, y
reglamento esceptua el tiempo de peste, en cuyo caso r causas graves, pero que no merezcan el instruir
cualquiera cura, vicario ú ecónomo, sea regular ó as bajo la forma de proceso criminal, se ejecuten
secular, puede autorizarlos; y están obligados asi no obstante cualquiera apelacion.»
como los demas oficiales públicos, á observar todas Segun esla declaracion, es cierto: primero, que
las formalidades prescritas por el reglamento y los es un obispo no puede enviar al seminario mas que por
tatutos locales. tres meses á los curas sin forma de proceso criminal;
Los obispos, como los primeros pastores y cabeza segundo, que no puede hacerlo mas que durante la
de su diocesis, tienen un derecho de inspeccion y vi visita; tercero, que debe formar la sumaria que es la
gilancia que trae consigo necesariamente la facultad base de su reglamento; cuarto, es preciso que la fal
de castigar y corregir, sin la cual no podrian man— ta sea grave; quinto, en fin, que el reglamento, aun
tener el buen orden y la observancia de la disciplina que causaejecutoria, no obstante la apelacion, sin em
que les está encargada. Uno de los medios mas efica bargo, está sujeto á ella. Por lo que se puede con —
ces para lograrlo es sin duda la celebracion de los sí cluir de esla declaracion, que si el obispo mandase
nodos, y en estas juntas es donde se pueden remediar tres meses de seminario á alguno fuera de la visita
los abusos generales que se introducen en una dióce ó sin forma sumaria, su mandamiento podria ser de
sis, y en ellas es donde los curas menos celosos y mandado por via de apelacion, reclamando el abu
menos atentos al cumplimiento do sus obligaciones so, y es creible que en este caso el cura obtendria
pueden aprender el espiritu y las virtudes eclesiásticas fácilmente una salvaguardia para no ser atropellado.
con el ejemplo y los discursos de sus superiores y Hay dos medios de apelar reclamando el abuso del
compañeros. Asi es que en todos los siglos los con - mandamiento de un obispo que impusiese á un cura
cilios han usado de rigor con los curas que intenta la pena de seminario por un cierto tiempo. El pri
ban sustraerse de este yugo saludable. El concilió de mero se toma de la falta de las formalidades prescri
Metz del año 1756 impone la pena de sesenta libras tas por la declaracion de 1698, y el segundo del
de limosna á los que no quieran asistirá ellos, y el fondo mismo del mandamiento. El primero puede ser
de Sainte, del año 1280, les impone la de entredi— suspensivo, es decir, que los tribunales pueden con -
cho. El concilio de Trento trató tambien espresamen ceder una salvaguardia; pero si el abuso solamente
te de este punto, y esta ley de disciplina se adoptó en está fundado en la injusticia misma del mandamiento,
nuestros tribunales, los que han espedido varios decre es solo devolutivo, y el mandamiento se pone enton
tos, obligando á los curas á que asistan á los sínodos. ces en ejecucion, sin perjuicio de la apelacion. Para
Los curas que son regulares, y por esta razon se que los curas esten en el caso de justificarse si son
juzgan esenios de la jurisdicion ordinaria,, estan inocentes, ó de correjirse si son culpables, deben te—
sujetos á esta ley general. Bardel refiere un decreto ner copia de la sumaria que se ha formado contra
de 23 de febrero de 1637, en el cual se confirmó la ellos. Si logran demostrar que el obispo ha usado de
multa de ocho libras de limosna impuesta por el obis rigor contra ellos solo por una animosidad, pueden
de Beauvais á uno que era cura de la Orden de edir que les resarza los daños y perjuicios, lo que se
Malta. M. Bignon, que informó en este litigio dijo que ¿ visto en algunas ocasiones distribuyendo los curas
la obligacion de asistir al sínodo no perdia su vigor á los pobres de sus parroquias la suma que les habian
ni con la esencion, ni con la prescripcion. Otro de adjudicado.
creto del gran consejo, referido por el autor de las Un decreto del parlamento de Aix de 28 de marzo
Memorias del clero, en el tomo llI, pág. 723, ¿. de 170 nos dice que los obispos, aunque no esten
ne al cura de la parroquia de Mont-Saint-Michel, de visita, pueden enviar al seminario á los curas
diócesis de Abranches, la obligacion de asistir al sí con tal que sea por menos tiempo de tres meses, pues
nodo diocesano siempre que los obispos lo convo entonces no se considera como una pena, sino como
quen, no obstante su pretendida esencion de la ju una correccion paternal, y un remedio saludable para
risdicion episcopal. Entre las penas que pueden im recordarles el cumplimiento de sus obligaciones. Por
poner los obispos á los curas hay unas que pro lo que hace á los provisores ó vicarios generales, se
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les disputa la facultad de enviar al seminario á los jas á ellos, hacian que se les pagase cada vez que
curas durante su visita, y aun los autores que esian mudaban un ecónomo el derecho tan conocido hajo el
en favor de ellos, convienen en que es preciso se es nombre de rescate de los altares, altarum redemptio.
prese esta facultad en sus títulos. El clero, para evi Tal es el origen de la posesion en que estan mu
iar disputas sobre este punto, solicitó en 1726 una chos monasterios de algunos curatos. Sin embargo,
declaracion que aun no se ha dado. debemos convenir en que hay algunos de estos que
En Francia distinguimos varias especies de curas; han servido para la fundacion y dotacion de algunos
los hay que se llaman curas primitivos y curas vica monasterios, y otros traen su origen de las capillas
rios perpétuos que tienen cargas y facullades total ue los monges tenian en sus granjas ó quintas, que
mente diferentes. Hay tambien curas seculares, y espues se convirtieron en parroquias, aunque de es
curas regulares. Las obligaciones de los unos y de los tos últimos hay pocos; por lo cual distinguiendo nues
otros, con respecto á los fieles, son absolutamente las tras ley es los cabildos y monasterios de los curas pri
mismas; pero las obligaciones, que impone la vida mitivos, han tratado nas favorablemente á los ca
monástica y la obediencia debida á la regla que pro bildos que á los monasterios, á lo menos en cuanto
fesan, tienen sometidos á los curas regulares á sus á los derechos honoríficos. Era sin duda un gran des
leyes, las cuales no tienen que observar los secula orden el ver los pueblos confiados al cuidado de pas
res, y las referiremos cuando hablenos de los curas tores amovibles á los cuales rehusaban hasta lo ne
primitivos y de los curas vicarios perpétuos. - cesario los curas primitivos. La Iglesia levantó el gri
Curas primitivos y curas vicarios perpetuos. Anti to contra este aboso intolerable, pero sus reglamentos
uamente no habia mas que una especie de curas en y sus amenazas fueron inútiles, y la codicia por mu
a Iglesia, y hasta el siglo VII no empezó la distincion cho tiempo tuvo medios para eludirlos. Nuestros prín
de curas primitivos y curas subalternos. El origen de cipes, protectores de la religion, la han prestado au
esta distincion se puede atribuir á diferentes causas. silios en esta ocasion, y con sus leyes han puesto en
La primera sin duda, y la mas favorable, es la dis vigor los cánones. El articulo 12 de la ordenanza de
tincion que hicieron los obispos con algunos curas de 1629 está concebido en estos términos: «los curatos
las aldeas, llamándolos á su lado para que les ayu que están unidos á las abadias, prioratos, iglesas
dasen en la administracion de la diócesis, formando catedrales ó colegiatas serán separados en adelaile, y
una parte del clero de la catedral. Estos presbíteros con títulos de vicarios perpéluos, sin que en lo futuro
conservaron las rentas de sus curatos, haciéndolos las referidas iglesias piedan ecsigir de aquellos cura
servir por otros presbíteros que estaban á sueldo su los otros derechos que los honoríficos, destinándose
yo, por decirlo asi, sobre los cuales se atribuyeron toda la renta para titular en el caso de que las re
una especie de superioridad. Hé aquí la razon por feridas iglesias ú otros beneficios, de los cuales de
qué hay muchos cabildos que son curas primitivos penden los dichos curatos, no prefieran suministrar
todavia. á los vicarios la suma de 300 libras anuales, como
Habiéndose introducido hácia el siglo IX la ig— se lo pediremos á nuestro santo padre el papa». Pa
norancia y la barbárie feudal hasta en el clero secu— rece que este artículo no se puso en ejecucion, ó á
lar, que no pudo preservarse de la corrupcion en lo menos hubo muchas dificultades, como se puede
medio del pueblo corrompido, hubo de recurrir á conocer por las muchas declaraciones que Luis XIV
los monges. Las costumbres y las ciencias refugia y Luis XV hicieron sobre este asunto.
das en los claustros fueron entonces un grande ausi El preámbulo de la de 29 de enero de 1686 los
lio para la Iglesia; pero luego que el clero secular dice que en algunas provincias del reino ciertos curas
salió de aquel estado de adyeccion y conocieron que primitivos, y otras personas á quienes, perienecia la
las funciones del ministerio eran incempatibles con la colacion de los curatos y de los vicarios perpétuos,
vida monástica, entonces la Iglesia, que se habia ser ponian de sirvientes otros presbíteros por el tiempo
vido de los monges, como si dijéramos de unas tropas que les parecia con una retribucion uuy corta.
auxiliares, de quienes echó mano por necesidad en El rey, para corregir este abuso tantas veces re
aquellas circunstancias desgraciadas, las restituyó á probado por los cánones manda: «Que los curatos
su primitivo estado, haciendo que vo viesen á sus que están unidos á los cabildos ú otras comunidades
claustros. En aquella época eran dueños de casi to eclesiásticas, y en los que hay curas primitivos, se
dos los curatos. Los obispos les habian confiado una desempeñen por curas ó vicarios perpéluos que sean
gran parte de ellos, los señores legos que se habian provistos con título, sin que en adelante puedan sus
apoderado de los bienes eclesiásticos, y estuvieron tituir presbíteros amovibles por ningun pretesto», Es
en posesion de ellos por espacio de dos siglos, espe casi imposible á un legislador el preveerlo todo, por
cialmente en las parroquias, creyendo descargar su lo cual pocas leyes hay que no den motivo á disputas.
conciencia y hacer una restitucion suficiente, los en Muchas se originaron entre los curas primitivos y los
tregaron á los monasterios, siendo asi que no les ha vicarios perpétuos, porque hasta entonces lampoco
bian pertenecido nunca. Los monges, al relirarse á estaban arreglados sus derechos respectivos. Al mis
sus claustros, conservaron las renlas de las iglesias mo tiempo que pagaban la porcion cóngrua á los vi
parroquiales; se les toleró que las disfrutasen con la carios pérpetuos los curas primitivos, los perturba
obligacion de hacer servir los curatos por unos pres ban en la percepcion de las oblaciones, ofrendas y
bíteros seculares que eran amovibles. Hubo muchos otros derechos eventuales. La declaracion de 30 de
obispos que por consentir y tolerar el que estuviesen º de 1690 tuvo por objeto el quitar todas aque
en unas manos el cargo y las obligaciones de los cu— las disputas escandalosas: «Queremos, dice, que los
ratos, y en otras los emolumentos y las riquezas ane vicarios y curas perpétuos gocen para siempre de to
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das las oblaciones y ofrendas, bien sea en cera ó en con perjuicio de los vicarios perpétuos, en quienes
dinero, y las demas retribuciones que componen el permanecerá la provision mientras durase el pleito:
adventicio de la Iglesia, juntamente con los fondos de no serán reputados como válidos para este efecto
aniversarios y fundaciones para el culto divino, sin otros títulos que las bulas del papa, decretos de los
ninguna diminucion de su proporcion cóngrua, y sin arzobispos ú obispos, ó documentos de una posesion
que obste transaccion alguna, convenio, posesion, de cien años sin interrupcion y sin que sean de valor
sentencias y decretos, á los cuales mandamos, que alguno las transacciones ú otros documentos, ni las
nuestros tribunales y jueces no den cumplimiento. sentencias y decretos que hayan sido dados en favor
Podrán, sin embargo, los referidos curas primitivos, de los curas primitivos, á no ser que por su autenti
si tienen título ó posesion válida, continuar celebran cidad y el haberse puesto en ejecucion hayan adquiri
do en las cuatro fiestas solemnes y el dia del santo rido i de autoridad necesario que los hagavá
patrono, en cuyo dia podrán percibir la mitad de las lidos.» La diferencia entre estos dos artículos con -
oblaciones y ofrendas, bien sea en cera ó en dinero, siste en que, segun el de 1726, la provision perma
y la otra mitad quedará para el cura vicario perpé— nece en los curas vicarios perpétuos durante el pleito,
tuo; y se restablece ademas en toda su fuerza y vigor y por el de 1731 los títulos de los curas primitivos
nuestra declaracion del mes de enero de 1686, segun deben ser ejecutados provisionalmente, aunque los
su forma y tenor en cuanto no esté derogado por la curas vicarios perpétuos hayan puesto demanda en
presente.» El edicto de 1695, en el art. 2, manda justicia contra ellos. La otra diferencia que hay, es de
los obispos incluyan vicarios perpéluos en don que toda transaccion ó decreto que no haya sido pues
e haya presbíteros amovibles, segun las declaracio to en ejecucion, no puede servir de lítulo á los curas
nes de 1686 y de 1690. Aun sin embargo de estas primitivos segun la declaracion de 1726; y segun la
leyes tan repetidas, se originaban todos los dias una de 1731 , todo decreto contradictorio ó transaccion
infinidad de pleitos entre los curas primitivos y los válidamente autorizada, causa título independiente
curas vicarios perpétuos hasta que las dos declara— mente de la ejecucion. La declaracion de 1726 era mas
ciones de 5 de octubre de 1726 y de 15 de enero favorable en este punto á los curas vicarios perpétuos
de 1731,, han fijado los límites de tal suerte, que no y nos parece mucho mas conforme á los principios,
cabe duda; todo está previsto en ellas, todo está de haciendo que sean mas difíciles las pruebas en que
terminado; las pretensiones escesivas de los abades, debe fundarse la cualidad de cura primitivo. ¿Deberá
priores y comunidades se reprimieron, los derechos permitirse en esta materia el suplir el título constitu—
de los cabildos se conservaron, y la situacion de los tivo con unos documentos posesorios ú otros equiva—
curas vicarios perpétuos, se fijó del modo mas con lentes? Los curas primitivos son tan contrarios á la
veniente á la importancia v dignidad de sus funcio disciplina de la Iglesia y al derecho comun como las
nes. La declaracion de 1726 contiene solo siete ar esenciones, y para estas no se admiten títulos que su -
tículos. La de 1731 es mucho mas eslensa; y como plan el título constitutivo, porque a un la posesión mis
es la mas vigente y forma la jurisprudencia actual, ma, por larga que sea, es inútil sin este título; luego
daremos razon de ella, comparándola con la de 1726: ¿por qué no ha de ser lo mismo con respecto á los curas
de este modo se podrán conocer todas las leyes que primitivos? Su posesion, aun con título, no solo es una
rigen en la materia. El art. 1.º asegura á los vicarios derogacion del derecho comun y contraria á la sana
perpetuos el título de curas vicarios perpétuos que disciplina de la Iglesia, sino tambien una violacion de
drán usar en todas ocasiones, aunque sea cuando la ley evangélica, que prohibe vivir del altar al que no
ablan con el cura primitivo; esto es lo que signi sirve al altar; y tambien contraria á la ley natural que
fica evidentemente la espresion en todos los actos y veda el comer y engrosarse á costa del sudor y tra —
en todas ocasiones. El art. 11 de la declaracion de 1726 bajo de sus hermanos; pues esta posesion sin título es
tiene otra disposicion igual. el mas intolerable de los abusos: nos dirán acaso que
Algunas comunidades y beneficiados particulares no quedarian curas primitivos si se les obligase á
se abrogaban sin fundamento el título de curas pri— presentar sus títulos constitutivos; pero ¿podrá mi
milivos; y el art. 11 de nuestra declaracion determi rarse como un inconveniente una ley que restablece—
na los que podrán usarlo en adelante. «Ninguno po— ria, la antigua disciplina y cicatrizaria en parte los
drá tomar el título de cura primitivo mas que aque males que afligen á la Iglesia?. Ademas de que no se
llos que tengan un derecho fundado en algun titulo ria destruirlos enteramente el evitar que fuesen tan
canónico, actos ó transacciones válidamente antori— comunes, y al fin sucederia lo mismo que sucedió con
zadas por decretos contradictorios ó documentos de los esentos, que se han conservado á pesar del rigor de
posesion centenaria. No tratamos de escluir los me - las leyes publicadas contra ellos.
dios y reclamaciones en justicia que puedan hacerse El art. 3.° determina á quién debe pertenecer el
contra los referidos actos y decretos, los cuales per título y funciones de curas primitivos con relacion á
manecerán en su vigor hasta que se mande otra cosa, las comunidades religiosas. Los monges se lo dispu
sea definitiva ó provisionalmente, por los jueces á taban á sus abades, priores regulares ó comendata
quienes competa segun se dirá adelante. rios, y á los superiores claustrales, presumiendo que
El art..." de la declaracion de 1725 se esplicaba en podian venir a oficiar en las iglesias donde su comu
estos términos: «no pudiéndose adquirir legítimamen nidad era cura primitivo cuando les acomodase, aun
te el título y los derechos de curas primitivos, sino en sin consentimiento del cura, vicario perpétuo, y este
virtud de un título especial, los que pretendan estar artículo trató de remediar los inconvenientes que se
fundados en él, tendrán que presentarlo siempre que originaban de las tales pretensiones diciendo: «los
sean requeridos, y faltando este, no podrán usarlo abades, priores y demas que estén provistos con
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título ó encomienda en un beneficio que tenga aneja marzo de 1691, es del parlamento de Paris, por el
la cualidad de cura primitivo, podrán solo ellos, y cual se negó la pretensión de los religiosos de Mont
con esclusion de las comunidades establecidas en sus Didier, diócesis de Amiens, en cuanto á la celebra
abadías, prioratos ú otros beneficios, usar el referido cion de los oficios divinos en una parroquia donde
título de cura primitivo, ejerciendo las funciones de estaban reconocidos como curas primitivos. Este úl
tal en persona sin que en su ausencia ó en tiempo de timo es mucho mas importante por ser posterior á la
vacante las referidas comunidades puedan funcionar, declaracion de 1690, la cual mantiene en el derecho
pues en estos casos solo podrán ejercerlas los curas de oficiar algunos dias del año á los curas primitivos.
vicarios perpéluos; y con respecto á las comunidades El art. 5 fija los derechos útiles de los referidos cu
que no tengan abad ni prior en título ó encomienda ras cuando ofician: «Los derechos útiles de los ree
y tengan los derechos de curas primitivos, ya sea por ridos curas prinitivos se fijarán, segun la declara
union de beneficios ó de otra suerte, los superio— cion de 30 de junio de 1690, en la mitad de las obla
res de las referidas comunidades podrán solamente ciones y ofrendas en cera ó en dinero, quedando la
ejercer las funciones de tales, sin que obsten á ello otra mitad para el cura vicario perpétuo , cuyos de
cualesquiera documentos, juicios y posesiones con rechos no podrán percibir mas que cuando hagan los
trarias, y sin que pueda alegarse tampoco ninguna oficios divinos en persona y en los dias espresados en
prescripcion contra los abades, priores ú otros bene— esta misma declaracion; todo esto en la inteligencia
ficiados ó contra los superiores de las comunidades de que los referidos derechos no se hayan arreglado
que hayan descuidado ó se descuidasen en hacer las en favor de los curas primitivos ó vicarios perpétuos
referidas funciones de curas primitivos aunque haya con títulos canónicos, documentos ó transacciones vá
transcurrido cualquier tiempo.» Estas disposiciones lidamente autorizadas, decretos contradictorios ó ac
son enteramente conformes al art. 5." de la declara - tos de posesion centenaria». Este artículo deroga la
cion de 1726. cláusula contenida en el artícuio 3.° de la declaracion
El art. 4.° arregla las funciones que pueden ejercer de 1726. El legislador prevenia en ella, que la mitad
los curas primitivos. «Los curas primitivos, si tienen de las ofrendas presentadas en los dias que los curas
título ó posesion válida, podrán continuar haciendo primitivos oficiasen perteneceria á los curas vicarios
los oficios divinos en las cuatro fiestas solemnes, y el perpétuos; «no obstante cualesquiera costumbres,
dia del santo patrono, sobre lo cual tendrán que avi convenios, transacciones, sentencias y demas títulos
sar á los curas vicarios perpétuos la víspera de la contrarios á ello.» Hubiera sido mejor no locará es
fiesta, conformándose al rito y santo de la diócesis la cláusula, no solo porque es favorable á los curas
sin que ni aun en dichos dias puedan administrar los vicarios perpétuos, sino tambien porque evitaba los
sacramentos ó predicar sin alguna especial licencia muchos pleitos que se originaban contra los preten
del obispo; y el contenido del presente artículo será didos títulos ó actos posesorios alegados por los curas
jecutado, no obstante cualquiera título, sentencia ó primitivos.
costumbre contrarias á él.» Este artículo es absolu Los artículos 6 y 7 conservan los usos particulares
tamente conforme á la declaracion de 1726. Por con y locales de las parroquias que tienen costumbre de
reunirse ciertos ¿ del año en las iglesias de los mo
siguiente debemos concluir que para ejercer las fun
ciones que están designadas en él, el cura primitivo nasterios y prioratos, bien sea para la celebracion del
debe tener un título ó posesion. Uno de los dos es su Oficio Diviño, ó para cantar el Te Deum, ó hacer
ficiente, ¿? la intencion del legislador es que la procesiones generales, etc.: estos dos artículos no
posesion supla el título, mandando en el artículo pre se hallan en la declaracion de 1726. Algunas parro
cedente que la prescripcion no destruya el título. quias hay situadas en iglesias de religiosos ó canóni
Tambien se deduce del mismo que el título de cura gos que son sus curas primitivos, y todos los dias ha
primitivo y las cargas anejas á él no dan derecho á bia disputas entre los religiosos ó canónigos y sus vi
ejercer las funciones que este artículo concede en ge— carios perpétuos siendo el motivo las mas veces la
neral á los curas primitivos. En efecto, ademas del preferencia en el coro y en los bancos, en las sepul
título de cura primitivo debe tener uno particular en iuras, en la Iglesia y en las horas de los oficios. Los
el que se le conceda la facultad de celebrar los ofi artículos 8 y 9 de la declaracion fijan los derechos
cios divinos, ó á lo menos probar la posesion; y esto de los unos y de los otros sobre estos particulares, dis
es lo que evidentemente nuestra declaracion, tinguiendo de intento lo que es de pura policia es
porque en el art. 2.º habla del título necesario para terna, de lo que ¿ á lo espiritual, que lo
tener la cualidad de cura primitivo; y en el que exa deja enteramente á disposicion de los obispos. Los
minamos ahora, solo se ocupa del título y pose dos artículos añadidos en la declaracion de 1726 son
sion que se requiere para poder oficiar las cuatro los siguientes: art. 8.” «mandamos que en los pue
fiestas solemnes y el dia del santo patrono. Se funda blos donde la parroquia está situada en un altar par
esta diversidad en que la cualidad general de cura ticular de otra Iglesia, los religiosos ó canónigos de
primitivo no trae consigo los derechos honoríficos, la abadia, priores y demas beneficiados puedan con
porque bien pueden estar separados de los derechos tinuar cantando ellos solos las horas canónicas en el
útiles. Esta doctrina se apoya en dos decretos nota coro, y disponiendo de los bancos ó sepulturas en sus
b'es; el uno del gran consejo, dado el 20 de setiem referidas iglesias si estan en posesion pacífica é in
¿re de 1676, mantuvo al abate D'Esp reaux en el memorial de estas prerogativas».. Art. 9:º «Las di
tulo de cura primitivo de la parroquia de Cambon, ficultades, que hubiese y se originen en lo sucesivo
diócesis de París, y sin embargo no le permite ofi sobre las horas para celebrar la misa parroquial
clar en ella ningun dia del año; el otró, de 26 de demas oficios divinos en el altar y sitio ¿,
-
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la parroquia se arreglarán por el obispo diocesano, diezmos, señalando en primera instaneia á los jueces
á quien solo pertenece el señalar los dias y horas en ordinarios y demas jueces reales del distrito de los
que deberá esponerse el Santísimo Sacramento en el arlamentos, sin perjuicio de acudir á los tribunales
referido altar, ó en el de los religiosos y los regulares parlamentos en cuyo distrito estan, sin que obste
de la misma iglesia; y los reglamentos sobre el con ninguna evocacion, despacho real ó declaraciones
tenido del presente artículo se ejecutaran provisio COntrarias.
nalmente durante la apelacion sea simple ó reclaman. El art. 13 dice que las sentencias falladas en los
do el abuso; todo ello sin perjuicio, y no obstante pleitos mencionados en el artículo precedente, ó en
cualquiera privilegio y esenciones, aunque sea bajo favor de los cnras primitivos ó en provecho de los
el pretesto de jurisdicion casi episcopal alegada por vicarios perpétuos, sean ejecutadas provisionalmente,
las referidas abadias, prioratos ú otros beneficios, no obstante la apelacion, sin perjuicio de ella.
¿º las referidas esenciones ó jurisdiciones no El art. 1, al mismo tiempo que sujeta á la ejecu
eben tener lugar , en semejante , materia». Des cion de la declaracion referida á todas las Ordenes,
ues de haber fijado en el artículo ...º cuáles eran congregaciones, cuerpos ó comunidades seculares y
os derechos honoríficos que podian ejercer los curas regulares, aunque sea la Orden de Malta y la de Fon
primitivos conforme á su título y posesion, temien tébrault, hace una escepcion en favor de los cabildos,
do el legislador no haberse esplicado con bastante diciendo asi : «Sin que se entiendan comprendidos los
claridad, y deseando que no tuviesen ninguna espe cabildos de las iglesias colegiatas ó catedrales en la
cie de superioridad en lo espiritual ni en lo tempo presente disposicion en lo concerniente á las preemi
ral de las iglesias parroquiales, les previene en el nencias, honores distinciones de que estan en po
art. 10 que no presidan bajo ningun pretesto las jun sesion, como tambien la de predicar con permiso del
tas que celebren los curas vicarios perpéluos con su obispo algunos dias del año, de cuyas prerogativas
clero para tratar de sus funciones ú ohligaciones ú continuarán gozando del mismo modo que hasta el
otro asunto , semejante, como igualmente que no ¿ El legislador favorece mucho mas á los ca
asistan á las juntas de los vicarios perpétuos y los fa ildos que son curas primitivos, que á los mobasterios,
briqueros cuando se trata de las cosas de fábrica ó abades, priores y otros beneficiados, conservándo
de la custodia de las llaves, no obstanle cualesquie les los honores y prerogativas que no les concede
ra documentos, costumbres ó decrelos contrarios á estos. La razon de diferencia es porque la union
á ello. -
de los curatos á los cabildos es algo menos odiosa y
El art. 1 es muy interesante, porque habla del contraria al espíritu de la Iglesia que las que han si
único caso en que los curas primitivos pueden escu do hechas con los monasterios. La causa de las pri
sarse del pago de la porcion cóngrua. «Las abadias, meras fue la ventaja que resultaba á la diócesis y el
prioratos y comunidades que tengan derecho de cu beneficio de los fieles; y las otras, por lo regular,
ras primitivos, no se podrán escusar del pago de las no han tenido otro origen que la codicia de los mon
porciones cóngruas de los curas vicarios perpétuos ó ges, los cuales, al mismo tiempo que restituyeron el
sustitutos, so pretesto de haberles cedido los diezmos servicio de las parroquias al clero secular, abando
que les pertenecen , á no ser que les cedan tambien naron el trabajo y las cargas anejas, conservando lo
todos los bienes ó rentas que poseen en las referidas útil y honorífico. Decimos por lo regular, porque de
parroquias, y son pertenecientes al antiguo patri bemos convenir, como ya hemos dicho, , que hay al
monio de los curas, juntamente con el derecho y el gunos curatos que en su origen han sido legítimamen
título de cura primitivo ; todo esto sin perjuicio del te unidos á los monasterios por donacionó por fun
recurso que pueden hacer los abades, priores y reli dacion, ó porque fueron antiguamente quintasó gran
giosos recíprocamente los unos contra los ctros, se jas pertenecientes á las abadías.
gun los bienes cedidos, pertenezcan á la mesa del El art. 15 y último quiere que sean ejecutadas
abad ó prior ó á la de los religiosos». Esta disposi segun su forma y tenor la declaracion de 29 de
cion se encuentra en el art. 7 de la declaracion de enero de 1686, la de 30 de junio de 1690, y el artí
1726, y se ha renovado por el art. 8 del edicto de culo 1.° de la declaracion de 30 de julio de 1710, en
1768, concebido en estos términos: «mandamos ade lo que no son contrarias á la de que hablamos. Ya
mas, segun y conforme á nuestras declaraciones de 5 hemos referido las dos declaraciones de 1686 y de
de octubre d 1726 y 15 de enero de 1731, que el 1690, y para que no se eche de menos cuanto con
cura primitivo no pueda escusarse de contribuir con cierne á este asunto, pondremos el art: 1.º de la de
la referida porcion cóngrua bajo pretesto de haber claracion de 1710. «Mandamos que las órdenes de
hecho cesion anteriormente, ó de hacerla en el acto los arzobispos ú obispos, ó de sus vicarios generales
á los ¿ curas ó vicarios perpétuos de los diez que sean puramente de policía esterna eclesiástica,
mos que posea, sino que le obligamos á. completar el como por ejemplo las que se dan para los ¿
resto que hubiese, á no ser que haga cesion de todos nerales de campanas, las estaciones de jubileo,
los bienes, sin escepcion, que componian el antiguo as procesiones y las rogativas por necesidades pú
patrimonio del curato, juntamente con el título y los blicas, las acciones de gracias,, y otras cosas seme
derechos de cura primitivo». El art. 12 designa cuá jantes, se ejecuten por todas las iglesias y comu
les son los jueces que, deben fallar los pleitos con nidades eclesiásticas, seculares y regulares, esentas
cernientes á la cualidad de cura primitivo, los dere y no esentas, en los dias y horas señalados, y en
chos que le pertenecen como tal, y generalmente to cuanto al modo de hacerlas, sin perjuicio de la esen
das las demandas enlabladas entre los curas primiti cion que puedan tener en otras cosas». -

vos; los curas vicarios perpéluos y los participes en . Algunos autores han creido que la declaracion de
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- a

1731 habia derogado la de 1726, fundándose en que lo espiritual y temporal, se diferencian en un punto
el rey en el art. 15 hace mencion solamente de las de muy esencial de los demas curas, porque son amovi
1686, 1690 y 1710, las cuales manda que sean eje bles, y sus superiores regulares tienen facultades pa
cutadas. El silencio que ha guardado acerca de la de ra restituirlos al claustro sin forma de proceso; ni es
1726 es una prueba, segun dicen, de que no se mi tampoco necesario que hayan dado motivo con una
ra como vigente. Pero en leyendo el preámbulo de la conducta, reprensible, pues basta solo el bien de la
declaracion de 1731, se verá que forma una misma religion de su Orden, y en esto se conocen que de
ley con la de 1726 y las anteriores. «Con el fin de penden absolutamente de la voluntad del superior,
que cesen estos inconvenientes, juzgamos á propósito aunque siempre con la restriccion de que hablaremos
reunir en una sola ley las disposiciones de la declara despues. Esta amovilidad puede ser una prueba de
cion de 5 de octubre de 1726 y demas leyes anterio que los beneficios curados no causan impresion alguna
res, añadiéndolas todo aquello que faltaba para per en los regulares; y no siendo los verdaderos titulares,
feccionarlas». El legislador se esplica bien claro, y tampoco pueden ser los verdaderos esposos de sus
su intencion no es derogar la declaracion de 1726, si iglesias, porque los títulos que no ligan inseparable
no adicionarla ó perfeccionarla, y asi se la puede te mente á un cura con su beneficio, se pueden mirar
ner como vigente; y no hay duda que está en toda solamente como una simple comision y no como ver
su fuerza cuando la vemos mencionada en el art 8 del dadero título.
edicto de 1768, juntamente con la de 1731. «Manda La facultad que tienen los superiores regulares de
mos ademas, conforme á nuestras declaraciones de restituir al claustro á los religiosos curas cuando les
8 de octubre de 1726 y y 15 de enero de 1731» Lue parece podia tener muchos inconvenientes, porque
go estas dos declaraciones tienen igual autoridad. no hay cosa mas contraria al buen gobierno de las
No dejan nada que desear esta leyes acerca de los parroquias que el mudar á menudo los pastores; asi
derechos y prerogativas de los curas primitivos; solo como es interesante que no permanezca en un curato
nos resta tratar de sus cargas, que son el pago de la el que no sea apropósito para el cargo de almas, asi
porcion cóngrua, el suministrar lo necesario para el tambien es muy provechoso que el cura que desem
culto divino y la reparacion del coro y cancel de las peña bien sus funciones permanezca en su parroquia:
iglesias; pero como todos estos asuntos se tratan en y asi para conciliar el bien de las parroquias con las
las palabras diezmero y porcion cóngrua, donde les facultades de los regulares superiores; para no rom
corresponde hablaremos de lo perteneciente á los cu peró quebrantar los vínculos que ligan á los religiosos
ras regulares. con su respectiva Orden, y para precayer al mismo.
Segun el derecho comun, los religiosos son incapa tiempo esta variacion de pastores tan perjudicial, han
ces de poseer curatos; la vida comun y la obediencia resuelto nuestras leyes que los curas regulares, sin
debida á lossuperiores particulares son bastante opnes dejar de subsistir continuamente bajo la obediencia
tas á las funciones pastorales para encargarse de ellos.de sus superiores , no puedan ser revocados y sepa
Sin embargo, algunas congregaciones conocidas con rados de sus beneficios sin el consentimiento del obispo
el nombre de canónigos regulares de la Orden de diocesano. El obispo interesado en conservar al cura
S. Agustin, se mantuvieron en la posesion de los que cumpla con su obligacion, no consentirá en que
curatos que servian en aquellos siglos, que la ig le remuevan sin causa justa los superiores, y si la
norancia del clero secular obligó á la Iglesia á recur— conducta de un regular lo exigiese, coadyuvará pa
rir á los monges. Cuando se restituyeron á sus claus ra ello. Las leyes han previsto todos los inconvenien
tros y dejaron los curatos los canónigos regulares tes, evitando que los curas regulares queden espues
que estaban sujetos á una regla menos austera, con— los al capricho de sus superiores, y aplicándoles un
siguieron una esencion á su favor, como lo dice Ino pronto castigo si olvidan su deber. Este es el objeto
cencio III en el capítulo cum Dei timorem, de statu de los depachos reales del mes de octubre de 1679,
monachorum, decidiendo, que aunque estan verdade— registrados el 6 de diciembre siguiente en el gran
ramente comprendidos en el número de los monges d consejo, y espedidos para la congregacion de santa
sanctorum monachorum consortio non putantur se Genoveva los de 9 de agosto de 1700 espedidos para
juncti, con todo, su regla, menos austera que la de los religiosos de la estrecha y comun observancia de
los demas religiosos, regulae la rioris, no era un im premostratenses; los de 27 de febrero para la Orden
pedimento para servir los curatos, siempre que tu— de la Trinidad y redencion de cautivos, y los de 22
viesen consigo uno de sus compañeros para conservar de octubre de 1710 para los religiosos de la Cancela
en lo posible el espíritu de la regla, ad cautelam, di da. Un decreto del gran consejo de 6 de octubre de
jo el papa. El P. Tomassino refiere unos eslatutos he— 1697 mandó que los curas de la Orden de Fontevrault
chos por un legado del papa, de acuerdo con el con no pudiesen ser removidos sin consentimiento del
de de Tolosa en el año 1232, en los cuales se previe obispo. - -

ne que haya á lo menos tres canónigos regulares en Los regulares no pueden aceptar curatos sin per—
cada una de las iglesias parroquiales que esten á su miso del superior, como lo dicen espresamente las
cuidado. Por la regla de secularia secularibus, regu declaraciones y despachos reales referidos; y es tan
laria regularibus se habilitó y confirmó á los canóni esencial este consentimiento, que segun las leyes
gos regulares para obtener los curatos pertenecientes dictadas para los genovevinos, faltando este requisito
á las abadias de sus Ordenes, y en el dia no se les dis habrá una nulidad radical, por la que se declare el
puta este derecho. -
beneficio vacante é impetrable. En lo demas, estan
los curas regulares, aunque gocen de todos los de sujetos, como curas, á todos los reglamentos de la
rechos y prerogativas anejas á la cualidad de cura en diócesis, aunque esten esentos de la jurisdicicn
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como regulares, porque el obispo la tiene sobre tracion de los sacramentos. El aumento de feligreses
ellos, lo mismo que sobre los curas seculares, y pue— no es un motivo razonable para erigir de nuevo un
de visitar sus iglesias, imponerles las penas canóni curato, segun dicen otros muchos autores, porque
cas cuando incurren en algun delito, y aun si fuese en este caso el cura puede asociarse con otros coope
necesario, procesarlos criminalmente; no hay duda radores y vicarios, aunque es preciso convenir en
que estan sujetos al provisor diocesano. que esta razon no es sólida; pues un cura no puede
Para tratar de todo cuanto tiene relacion con es— multiplicarse hasta lo infinito, y por virtuoses y há
le artículo, nos resta decir algo de los curatos. Un biles que sean sus vicarios, no tienen aquella misma
curato ó parroquia es, como se ha dicho al principio autoridad que el cura sobre los pueblos, por lo que
de este artículo, un territorio circunscrito y limita siempre que los obispos han erigido en curato algu"
do, cuyos habitantes estan encargados en lo espiri nos anejos ó ayudas de parrroquia, donde absoluta
tual al cuidado de un presbítero afecto á una iglesia mente hablando podria ser suficiente un vicario, sus
construida en él, adonde se reunen los vecinos para disposiciones y decretos han sido confirmados por
cumplir con sus deberes religiosos, y asistir á las los parlamentos. Asi sucedió en el año 1672 con la
ceremonias de la Iglesia. Sus límites son impres de S. Roque, que hasta entonces habia sido ayuda
criptibles, es decir, que siempre que se presente el de parroquia de S. German-L“Auxerrrois, se decla
título de ereccion y su deslinde desvanece toda pre ró que no era un abuso esta ereccion, aunque se
tension que solo esté apoyada en la posesion; pero habia , aprobado que un simple vicario bastaha para
á falta de título basta una posesion inmemorial para servirla. -

reclamar un canton ó porcion de territorio como Los obispos son los jueces de la necesidad ó mayor
perteneciente al curato; muchos autores hay que utilidad en la ereccion de los curatos; pero no por eso
solo piden una posesion de cuarenta años, y esta opi se crea que sus decisiones pueden ser arbitrarias en
nion parece bien fundada. Cuando hay situadas al este negocio. El edicto de 1695 los precisa á que ob
gunas casas en los confines de las dos parroquias, la serven las solemnidades y procedimientos debidos. El
colocacion de la puerta por donde se entra, es la que mas principal é interesante de estos es la informacion
designa á qué parroquia pertenecen; de lo que se de commodo et incommodo, y por el'a sola puede pro
sigue que en este caso se puede mudar de parroquia barse la legitimidad de las causas que son necesarias
mudando la entrada de la casa y asi se decidio en un para erigir el nuevo curato; por lo que se deben oir
decreto del parlamento de Paris de 6 de marzo de las partes interesadas, de cuyo número son los curas
1650, que refiere Dufresne en el libro 6, cap. 1. El y mayordomos de fábrica: no sucede lo mismo con
cura y los mayordomos de fabrica de la parroquia los patronos; si la parroquia es de patronato no es
anterior no pueden pedir indemnizacion alguna; as: necesario su consenlimiento, solo basta que sean ci
se ha resuelto por otro igual decreto del parlamento tados y oidos en cuanto espongan relativamente á la
de 3 de mayo de 1670. Si por causa de esta altera conservacion de susderechos. Parece que antiguamen
cion perdiese un cura alguna parte de su renta, tam te no habia que recurrir al príncipe para la erecciºn de
bien se descarga al mismo tiempo de una parte del los nuevos curatos; sin embargo, ha prevalecido la
peso de sus obligaciones, y asi todo se halla com costumbre, y por lo regular se piden los despachos
pensado. Los líumites de las parroquias de S. Sulpi reales, que es lo mas seguro; y aun muchos autores
cio y de S, Cosme se han arreglado lambien bajo es— pretenden que sin ellos no podria el nuevo titular pro
te pie, y el reglamento que se hizo fue ratificado con ceder en justicia y defender los derechos de su bene
un decreto del parlamento de 18 de enero de 1677. ficio, y aun son indispensablemente necesarios cuan
De todos estos decretos se deduce, que aun cuando do los vecinos tienen que suministrar la porcion cón
la ereccion de una parroquia, y la fijacion de los lí grua al nuevo cura de sus propios bienes.
mites de su territorio pertenece á la autoridad epis El obispo debe proveerá la dotacion del nuevo cu
copal, los pleitos que se originen con este molivo rato, lo que puede verificar, segun dice el arl., 14
entre las parroquias establecidas son de la compe del edicto de 1695, por medio de la reunion de diez
tencia de los jueces reales. mos y otras rentas eclesiásticas. Si el cura de la par—
Los , obispos únicamente tienen facultades , para roquia antigua es de los mayores partícipes, debe
eregir los curatos: «Los arzobispos ú obispos, dice el contribuir á la porcion cóngrua del nuevo cura á pro
art. 1 del edicto de 1695, podrán erigir los curatos rala de lo que percibe en los diezmos. Como no per—
en los pueblos ó parajes que les parezca necesario, judica en nada á los derechos de los partícipes la nue
uardando las solemnidades y procedimientos debi va creacion de un curato, resulta que el cura no tiene
¿ En las circunstancias actuales, cualquiera cu derecho alguno sobre los diezmos, á no ser que le
rato que se erija es por necesidad una desmembra— cedan una parte de ellos para completar su porcion
cion de otra parroquia, y su funcion es al mismo cóngrua. Si no fueran suficientes los diezmos el obispo
tiempo una seccion ¿ beneficio, lo cual no ha per deberá proveer reuniéndole algunos beneficios sim
mitido nunca la Iglesia sino por graves causas y ra ples; y si la ereccion se hizo á peticion del señor del
zones de mucho peso. Segun el cap. ad audientiam, ierritorio y de los vecinos, deberán estos asegurar la
tít. de ecclesiis edificandis, y el decreto del concilio de subsistencia de su nuevo cura. En las ciudades donde
Trento en la sesion 21, cap. 4, unas de las princi los derechos eventuales son considerables y pertene
pales causas para erigir un curato es, cuando la dis cen á las fábricas, tienen que pagar estas la porcion
iancia de los pueblos y lo impracticable de los cami céngrua, segun vemos que se practicó en la ereccion
nos impiden que alguna parte de los feligreses asista del curato de santa Margarita en el arrabal de S. An
á la iglesia parroquial, y hace penosa la adminis - tonio, que la fábrica tiene que pagar trescientas libras
 CUR 596) CUn
anuales al nuevo cura. Esta ereccion que se hizo en rato es menos favorable que su desmembracion, aun
el año 1712 por el cardenal de Noailles, nos dá á co que se han reunido algunos á los seminarios de los
nocer que á la Iglesia matriz se la conservan los de cabildos. Nuestras odenanzas y el concilio de Trento
rechos útiles y honoríficos. Los mayordomos de fá hacen muy dificiles estas uniones. Los artículos 22 y
brica de la nueva parroquia desanta Margarita tienen 23 de la ordenanza de Bois prueban con toda claridad
que dar todos los años el pan bendito en la iglesia de que la union de los curatos con cualquiera otro be
San Pablo, la dominica infraoctava de la fiesta de este neficio que no lo sea, es contraria á la opinion del
apostol, á costa de la fábrica de su iglesia, y pagar legislador. Esta especie de beneficios, sirviéndonos
aquel dia diez libras á la fábrica de S. Pablo, y otras de la espresion de Mr. Talon, es de unas funciones
diez al cura, el cual puede ademas, si le acomoda, muy necesarias y eminentes para unirlos con otros
venir todos los años el dia de sanla Margarita con su beneficios que son de una dignidad inferior y menos
clero á celebrar en ella el oficio divino y ejercer enútil en la gerarquia seria lo mismo que igualar los
persona las funciones parroquiales, en cuyo caso lie miembros con la cabeza y poner á la hija en el mismo
ne derecho á repartir en el otro todas las ofrendas y rango que la madre.
honorarios. Casi las mismas reglas observóM. de Har Se han visto parroquias despobladas enteramente
lay cuando erigió en 1673 el curato de Bonne-Nou por causa de las guerras, ¿ a peste ó el hambre;
¿ que antes era ayuda de parroquia de S. Loren y como los feligreses que habian quedado no podian
zo. Este nuevo curato pagaba un censo anual de mil sostener un cura, se reunieron estos beneficios á los
doscientas libras al cura de S. Lorenzo, á quien se le curatos mas próximos; pero como esta union se hace
concedió además la mitad de las ofrendas que reco— sin estinguir ninguno de los dos títulos, debe cesar
giese el nuevo titular en las solemnidades de Pascua cuando la causa que lo había motivado no subsiste;
y Navidad: -
en llegando estas parroquias á repoblarse y resta—
Cuando la Iglesia matriz es de la plena colacion del lecerse deben volver las cosas á su primitivo estado,
obispo, tambien es colador del nuevo curato; asi se pues entonces se trata mas bien de restablecer un cu
ha observado con el de santa Margarita. Mr. Noailles rato antiguo que de dividirlo, esto lo protege mucho
se reservó su colacion porque tenia derecho á conferir el derecho canónico; y si los obispos no se prestasen
el de S. Pablo. Si el nuevo curato se dota á costa de
á ella por favorecer los mayores partícipes, ó por
los fondos del antiguo, el cura de este es el cura pri no pagar ellos mismos una porcion cóngrua, es nues
mitivo y patrono, porque es costumbre que los curas tro parecer que no habiéndose estinguido el título del
primitivos sean patronos de las iglesias parroquiales curato, y reviviendo este con el restablecimiento de
erigidas en su territorio; por esta razon el prior de la parroquia, podria ser imperado en la corte de Ro
S. Martin des-Champs adquirió el patronato de Nues ma, ó conferido por el superior, jure devolutionis, por
tra Señora de Bonne-Nouvelle, erigido en el arrabal derecho de devolucion.
de S. Lorenzo, y por la misma cedió Mr. de Harlay
á los religiosos de S. German el patronato de todos Mucho se ha disputado para saber de qué modo
los curatos que se fundasen en el arrabal de S. Ger podrá ser reconocida una iglesia como parroquia. En
el Diario de las audiencias se lee un decreto dado el
man. Lo mismo acaece cuando se erige en curato una
capilla, que el patrono de ella es tambien patrono del 12 de febrero de 1682, el cual admitió á los vecinos
curato, y conforme á esta práctica son patronos de de un pueblo, por prueba de que su iglesia habia sido
las iglesias parroquiales de S. Juan de Gréve, y de antiguamente parroquia, los antiguos vestigios de ce
San Gervasio de Paris, los abadesde la abadía de Bec, menterio y pila bautismal. Corrado, Lacombe y otros
en la Normandía. Sin embargo, se halló un medio varios autores observan con razon que estas pruebas
para no conceder á los patronos de las capillas erigi no son decisivas, porque hay muchas ayudas de par
das en curato el patronato de este, dejando el título roquia que tienen cementerios y , pilas baustimales,
de la capilla anejo al altar en que eslaba, y uniendo aunque estas presunciones pueden convertirse en
el del curato á otro altar, reservándose el obispo la pruebas, si consta por otra parte que el pueblo de
colacion de este modo, sin perjudicar á los derechos que se trata ha sido en otro tiempo considerable, y ha
del patrono. De este modo se hace en Roma, y se pu sufrido desastres y calamidades.
so en práctica cuando se erigió en curato la capilla de En cuanto al orden que deben guardar las parro
de santa Margarita. M. de La-Fayette era el patrono quias en las ceremonias públicas, se observan las re
lego, y como tal pretendia serlo de la nueva parro glas siguientes: Cualquiera parroquia debe ceder á
quia erigida en su capilla; el pleito pasó al consejo y la catedral la preferencia, ó á la colegiata si la hu
¿ indeciso hasta el año 1740, que la señora aba biese. Cuando en el pueblo son todas parroquias, la
esa de S. Antonio, á quien M. de La Fayette habia mas antigua debe precederá las demas. Si los curas
cedido todos sus derechos, le perdió en el parlamento van procesionalmente sin el clero de su parroquia,
de Paris, y Mr. de Vintimille fue mantenido en la ple— el de la mas antigua debe ocupar el primer lugar,
na colacion del nuevo curato.
aunque sea el mas jóven ó el mas nuevo de los cu
Si hay algunos casos en que se permite dividir un ras. En los sínodos o asambleas del clero no sucede
eurato, nunca puede ser con el fin de instituir un be asi, porque la ordenacion es la que fija el orden de
neficio simple, ó una vicaría perpetua. Esta division, los puestos segun la regla general, aunque hay al
absolutamente contraria al espíritu de la Iglesia y á gunas diócesis en que han prevalecido algunas cos
nuestras leyes, se declararia como un abuso, y lo tumbres particulares, y es indispensable conformarse
mismo sucederia si se tratase de unir los curatos á los con ellas. (Art. de Mr. el abate Remi, estractado del
beneficios simples. Por lo general la union de un cu Diccionario de Jurisprudencia).
 CUR 597j CUR
Curaelon. Ponemos con razon en el número de gracia á aquellos que se la pedian para sus padres ó
los milagros de Jesucristo la multitud de enferme— para sus criados. Estas curaciones eran repentinas,
dades de toda especie que ha curado, y sostenemos obradas en un instante á la presencia de enemigos
que estas curaciones eran evidentemente sobrenatu envidiosos que lo observaban; los enfermos recobra—
rales. Asi lo han juzgado no solo los testigos ocu ban todas sus fuerzas, sin necesidad de pasar la
lares que creyeron en él, sino tambien los judios á pe convalecencia. Este modo de curar ni es natural, ni
sar de su incredulidad, y apesar del aborrecimiento sospechoso; no se necesita ser médico ni físico para
que habian concebido contra él. - -
juzgar de él. Médicos esperimentados se han to
Para persuadir lo contrario, han recurrido los in mado el trabajo de probar que la mayor parte de
crédulos á varios espedientes. Unos han dicho que estas enfermedades, tales como las refieren los evan
estas enfermedades no eran verdaderas, sino simu elistas, eran naturalmente incurables. Haciendo
ladas, que los pretendidos enfermos eran unos fal justicia al mérito de su trabajo, nosotros creemos
sarios que Jesucristo habia preparado; otros que si que no era muy necesario.
las enfermedades eran verdaderas, las curaciones no Recurrir como los judios á la operacion de Dios
eran mas que aparentes. Muchos han pretendido que óá la intervencion del demonio es confesar que
eran naturales y un efecto del arte, pero que los ju hay algo de sobrenatural, y Dios no ha podido per
dios ignorantes las creyeron prodigios. Los judios mitir que lo hubiese hasta el punto de hacer el er
por su parte, las atribuian al demonio; despues sus ror inevitable. Los judios pensaban, á la verdad,
doctores han escrito que las habia obrado Jesus, pro que un falso profeta podia hacer milagros; pero esto
nunciando el nombre inefable de Dios. Estas mismas era un error y una inconsecuencia, puesto que creen
variaciones demuestran la confusion de los incrédu aun hoy dia, por la fé de las profecias, que el Mesías
los, y prueban que ninguno de sus subterfugios pnede que esperan debe hacer milagros para probar su mi
satisfacer á un hombre sensato. Si hubiera sido posible sion. Galatin de Arcanis catholicae veritatis, lib. 8.
acusar de falsa la narracion de los evangelistas, no c. 5 y sig.
hubiera habido necesidad de recurrir á tantos espe— La curacion de los endemoniados ha prestado otras
dientes para eludir sus consecurencias. objeciones á los incrédulos. Responderemos á ellas
Jesus, lejos de haber presentado nunca ningun en otro lugar. Véase DEMoNIAco.
signo de impostura, ha reunido en su persona, todos Tiers en su Tratado de las supersticiones, 1.° parte,
los caracteres de un enviado de Dios; ha prohibido lib. 6, cap. 2 y 3, ha referido los pasajes de los PP.,
severamente á sus discípulos toda clase de mentira, los decretos de los concilios, los estatutos sinodales
de fraude, de engaño: los judios no se han atrevido de los obispos, los pareceres de los ¿ que
nunca á echarles en cara ninguno, y los han provocado prohiben absolutamente curar las enfermedades, y
á ello públicamente. Joan, c. 8, y 6. dejarse curar por exorcismos, por conjuraciones,
No le fue posible sobornar á la multitud de enfer por fórmulas de oraciones; es necesario ver que es
mos que curó en las diversas comarcas de la Judea, te modo de curar es un verdadero encantamiento y
no tenia bienes, su pobreza era innegable. Los enfer— una supersticion, puesto que las palabras no tienen
mos sobornados hubieran tenido gran peligro de ser por sí mismas la virtud de curar las enfermedades,
castigados por los judios; algunos hubieran procura no la pueden tener sino sobrenaturalmente; asi Dios
do descubrir la impostura, y se les habria recom— ciertamente no ha concedido esta virtud á ninguna
pensado por esto. Era tal la naturaleza de las enfer palabra; y si una fórmula cualquiera produjera al
medades que no se podian simular; una mano seca, gun efecto, era necesario atribuirlo al demonio. Pe
paralíticos, uno de éstos era conocido por tal hacia ro se debe desconfiar mucho de lo que han referido
treinta y ocho años, ciegos de nacimiento, maniáticos sobre este asunto autores áma crédulos, que
temidos por sus violencias. No son estas enfermedades tenian poco juicio, y que nada han visto por sí mis
que se pueden fingir, y cuya curacion puede simular mos; si alguna vez ha habido enfermedades curadas
se hasta el punto de engañar al público. or este medio, lo han sido mas bien con fuerza de la
Jesus no ponia para ello ni preparativo ni apara imaginacion que con ninguna otra virtud.
to; en cualquier parte donde encontraba enfermos,
en las ciudades, en los caminos, en la mitad del dia, Curso, cursus. Se llamaba asi, en los siglos
en medio de la multitud, ó en paraje retirado les medios, el oficio divino ó el orden de las horas ca
volvia la salud. No empleaba ni remedios, ni movi nónicas; este oficio, ordenado segun el rito galicano,
mientos violentos, ni ceremonias capaces de con— se llamaba cursus gallicanus, y cursario era el libro
mover la imaginacion; una palabra, tocarlos sola que lo contenia. Ducange, en la palabra cursus. Véase
mente bastaba; muchas veces curó enfermos ausen OFIcio DivINo.
tes, sin verlos y sin acercarse á ellos; concedia esta CURSO DE TEOLOGUA. Véase TeoLogIA.

FIN DE LA TODMICD º RIMERCD.

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TOMO . 81
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C-e. . . . . . . . . . Cura ecónomo.
C. p. . . . . . . . . . Cura párroco.
P. . . . . . . . . . . Presbítero.
p.ee. . . . . . . . . . Por tantos ejemplares. ,
p. b. . . . . . . . . . . Presbítero beneficiado.
Y . . . . , C. m. . . . . . . . . . . . Clérigo de menores. - -

-
Excmo. Sr. D. Antonio Posadas, D. Alfonso Angel Iniesta, c. D. Antonio Diaz.
arzobispo electo de Toledo,
Alfonso Martinez, p. Antonio Felix Garcia.
i
P.
Excmo. Sr. D. Juan José Bonel Alonso Pedrero, p., , , , Antonio Fernandez...,
y Orbe, obispo de Córdoba, Sres. Alvarez y compañia, p. 10ee. Antonio Garcia, p. , ,
. ... y patriarca. D. Ambrosio Alsina y Có, p. Antonio Garcia Rueda, c. p.
Excmo. Sr. obispo de Astorga. Amaro Maestre. Antonio de Goenechea, c. p.
Excmo. Sr. obispo de Calahorra. Andres Bartolomé y Colomo. Antonio Gomez, p.
Excmo. Sr. obispo de Canarias. Andres de Paco, p. Antonio Gonzalez, p. . . .
Excmo. Sr. obispo de Coria, Andres Escolar. Antonio Gonzalez y Calderon,
Excmo. Sr. obispo de Pamplona. Andres F. Montenegro. cura p; , , , , , ,
Excmo. Sr. obispo de Valladolid. Andres Maldonado, p. j Antonio Jaramillo, p.
Excmo. Sr. obispo de Tuy. Andres M. de Novoa, p. 2 ee. Antonio José Valle, p.
A Andres Palomar, c. p. Antonio Julvel.
Sr. Abad de Feis. Andres Pasaro, teniente c. Antonio Lino y Garcia, p.
D. Agapito Perez. Andres Vara, p. - Antonio Lopez.
Dr. D. Agapito Silva, p. Angel Cabello. Antonio Los-Arcos, p. b.
D. Agapito Trigueros. Angel Macias, benedictino. Antonio Maria Britor.
Dr. D. Agustin Alier, catedrá— Angel Martinez. Antonio Maria Cuello, c. p.,
tico. Angel Palud, p. p. 2 ee.
D. Agustin Bermejo, p. Angel Perez, franciscano. Antonio Maria Herrero y Tra
Agustin Cheril. Antonio Arias, p. ña, p. 2 ee. ""
Agustin de Mate Perez, c. p. Antonio Armisen, c. p. - Antonio Maria Torres.
Agustin Fustel, c. p. Antonio Benigno Cabrera. Antonio Mateos, p. b. , ,
Agustin Gomez, p. Allonio bugalla,
C. p. Antonio Medina.
.
Agustin María Bello, c. p. Antonio Cabrera. Antonio Mendez, p. ,
Agustin Ramon García, p. Antonio Camps, p. 4 ee. Antonio de Mora, p.,
Agustin de Urbina, p. Antonio Carrillo, p. Antonio del Rio, p.
Amalio Cereceda. Antonio Carrillo, teniente c. Antonio Perez, c. p.
Alejandro Brabo, p. Antonio ¿? y Araujo.
Antonio Castan, c.
Alejo Quintana, estudiante. Antonio Rodriguez.
Antonio Cuellar, p. b.
(1) Sin embargo de haber reclamado varias veces á los comisionados la lista de señores suscritores
que estan á su cargo, no han sido remitidas por algunos: lo cual manifestamos á los señores suscri
tores cuyos nombres no se hallan en la lista de este primer tomo, para que no se impute esta falta
á la redaccion. , , , , , -

A D.Cipriano Aznar, canónigo vi
D. Antonio Roldan, c. p.
Antonio Romero, p.
Antonio Ros de Loasa, p.
Antonio Sanchez, p.
Antonio Santiago Guzman, te
niente cura:
Antonio Serret, c. p.
Antonio Sirvent, c. p.
Antonio de Teba, p.
Antonio Vega.
Antonio Vidal, vicario.
Antonio Quero, p.
Atanasio Rojas.
Aureliano Martinez.
Asensio Zuloaga, p. 5 ee.
Antonio José de Cuellar.
Avelino Pastor, p. 2 ee.
B -. Diego de Alba. --
. Baldomero Garcia.
Baltasar Carro.
Baltasar Santis, c. e.
Bartolomé Berdiz, c. p.
Bartolomé Boscada, p. 2 ee,
Bartolomé Garcia, c. p.
Bartolomé Lopez.
Bartolomé Sanchez, p.
Benito Espinosa.
Benito Fernandez.
Benito Nieto, c. p.
Bernardino Rodríguez, p.
Bernardo Calvo, p.
Bernardo Dorado, c. p.
Bernardo Grañon, c. p.
Bernardo Hernandez, p.
Bernardo José de Olives y Vigo. P. Domingo Sierra,
Bernardo Fustel, c. p.
Bernardo Olay, p.
Bernardo Piriz, p.
Bernardo Rodrigo. a
Bernardo Sádaba.
Blas Cadenas, p.
Blas Nieto.
Bonifacio Martin Lázaro, p.
Bonifacio Serrano.
Buenaventura Grau, p.
Buenaventura Pons, francis
Can0,
Buenaventura Sanz, p,
C D. Felipe Cevallos.
Licenciado D. Calisto Carcedo, p.
R. P. Calisto Soto.
l). Calisto Zalaga.
Cándido Dominguez, c. p,
P. Cayetano Bellon.
D. Ceferino Garcés, p.
Cayetano Borrás.
Carlos Praigada, abogado.
Cayetano Soñer, p.
Claudio Vigil, c. p,
Claudio Villanueva, p.
Clemente Lezcano, canónigo.
Clemente Quiñones.
Clemente Ruiz, c. p.
LISTA DE SUSCR1 TORES.
cario.
Cipriano Remon Racionero, vi
cario.
Cirilo Arribas.
Cirilo de Agustin, p. 4 ee.
Excmo. señor Comisario general
de Cruzada.
D. Crisanto Delval y Espinosa.
Cristobal Canela, p
Cristobal Corbalon , teniente c.
Cristobal Hernandez, exclaus
trado, p. 2 ee.
Sr. Cura párroco de Arenillas.
D ra párroco.
D. Damian Lucas.
Sr. Dean de la catedral de Orense.
. Deogracias Bueno.
-
Dionisio Martinez, estudiante.
Diego Medina, p.
Diego Perez, vícario.
Diego Vazquez, estudiante.
Dionisio Andres, p.
Dionisio Gonzalez, p.
Diego Fernandez de Piña.
Domingo Austulez, c. p.
Domingo Bayo, c. p.
. Domingo Evia y Prieto, c. e.
. Domingo Laverdure, profesor
de lenguas.
Domingo Lobo, teniente cura,
p. 2 ee.
Domingo Guinza, c. p.
Domingo Salazar, p.
E
p. 8 ee.
- -
. Eduardo Antonio Martinez, cu
ra párroco.
Emeterio Gutierrez.
. D. Emeterio Soria, p.
. Enrique Rodrigo, p. 2 ec.
Enrique Segoviano, c. e.
. D. Epifanio Diaz Castañeda, p.
Esteban Tejerina, diácono.
Eugenio Aguado, p.
Eustaquio Aguado y Caballero.
Eustaquio Ercazti, arcipreste.
EF
Felipe Lopez, p,
Felipe Morales, p.
P. Felipe Navarro. ,
D. Felipe Perez, c. p.
Felipe Sanchez, c. p.
Felix Francisco Gamiza, vi
cario.
Felix Sanz.
Felix Garay.
Felix Lizarralde, p,
Felix Lopez, p.
Felix Martinez, p. b., p. 2 ee.
Felix Salvans, c. e.
Felix Sanchez Fano.
D. FelixSedano, p.
Felix Valenzuela.
-
Fermin de la Cruz.
Fermin Rodriguez, c. p.
Fernando Cotado.
Fernando Gato, c. p.
Fernando Gonzalez.
Fernando Gorgojo, c. p.
Fernando Gutierrez, p.
Fernando Hernandez del Ma
zo, p,
Fernando Joaquin Fernandez,
cura ecónomo.
, Fernando Martinez Conde, cu
Fernando Perez.
Fernando Rivas y Velarde.
Fidel Ruedas Crespo, p.
.
Fidel Valduque, p
Francisco Antonio Alcazar, p.
Francisco. Asis Morales, p.
Francisco Astiz Azpiroz.
Francisco Bta.Lisbona, p. 4 ee.
Francisco Bernabeu, c. p.
Francisco Bordalonga, p.
Francisco Castro, p.
Francisco Cervera y Perez,
canónigo.
Francisco Cid, provisor.
Francisco Corado, p.
Francisco Cornejo, c. p.
Francisco Lopez.
Francisco Larray, c. p.
Francisco de Paula Nono.
Francisco de Diego Pinillos.
Francisco de las Rivas Fernan
dez de Córdova.
Francisco de Paula Brihuega.
Francisco de Paula Criado, p.
Francisco de Paula Siñigo,
cura párroco.
Francisco Diaz, c. p. , , ,
Francisco Elorz, p. b.
Francisco Feijoo.
Francisco Fernandez, c. p.
Francisco Gallardo, p. ".
Francisco Gamito, p.
Francisco Garcia, ºp.
Francisco Garrido.
Francisco Gimenez, c. p.
Francisco Gomez Bañares, cu
ra párroco.
Francisco Gonzalez, p.
Francisco Gonzalez Cepeda,
estudiante.
Francisco Gonzalez, estudian
le.
Fr. Francisco Javier Gomez, vi
cario.
D. Francisco RodriguezObregon,
penitenciario.
Francisco José Mardones, ca
nónigo y catedrático de de
recho canónico.

F -
D. Francisco Laina y Huerta, c. p. D. Ignacio Antonio Navarro.
Francisco Lomas, p.
Francisco Lora.
Francisco Lucas.
Francisco Mansilla, p. b.
Francisco Maria Herrera, vice
prior. * Ignacio Jugo, p. 2 ee.
Francisco Martinez, , canónigo.
Francisco Martinez Oliva.
Francisco Mazon de Solares.
Francisco Moyano, licenciado
en cánones.
Francisco Monserrat, c. p.
Francisco Morales, abad.
Francisco Ordoñez, p.
Francisco Oria, p. b.
Francisco Otero, c. p.
Francisco Pacheco, c. p.
Francisco Palacios y Olíva, vi
Carl0, -
. Francisco Perez.
. Francisco Plácido de Urarte,
cura párroco.
Francisco Pretos, rector.
Francisco Reina, p.
Francisco Rico, canónigo y ca
tedrático.
Francisco Rodríguez, estu—
diante.
Francisco Romero, p.
Francisco Rozas, canónigo.
Francisco Rubio, p.
Francisco Sanchez Zornoza, cu
ra párroco.
Francisco Saracebar.
Francisco Sarmiento, p.
Francisco Sarrió, c. p.
Francisco Terrones, c. e.
Francisco Villasante, c. p
Fulgencio Moreno Dávila, p.
Fulgencio Septiem.
G.
. Gabino Sanchez,
Gabriel Squella y Olives.
Gabriel Torres.
Gaspar Diaz Labandero.
Gaspar Martin, p.
Gaspar Ortega, c. p.
Gerónimo D'Augerot.
Gerónimo Leon de Rojas.
Gerónimo Vadillo, p. b.
Gervasio Costa, catedrático.
Gonzalo Lopez.
cº Benito Saavedra, a
3.0,
Gregorio Fernandez, p.
Gregorio Garcia, c. p.
Gregorio Maria Fernandez.
Guillermo Perier, p.
. Honorio Maria de Onaindia,
b. -
Hilarion Inza, dominico.
LISTA DE SUSCRITORES.
, "..., º D. José Garcia.t.
José Garcia, p, / o
Ignacio Caneja. - José Garcia Ballesteros, p.
Ignacio Carbó, p. 10 ee. José Garcia Vicuña. / -
lgnacio Carrera. José Gomez...;. - .
Ignacio Garcia Lopez, p. José Gonzalez, p. b. - .
Ignacio Fernandez. José Guerra, p. in, º-.
José Guilló, p. 1, ob - ol.
Ignacio Ordis. José Gutierrez, c. pu l
Ignacio Peuzol Labandera. José lnfantes, p. -ol.
Ignacio Silva. José la Cruz. . . - , ,
Ildefonso Bribalta. José Laimon, c. p. -i.
lldefonso Muñoz, p. José Lopez. Funes, p. -ol.
Inocencio Bolado, estudiante. José Lorente. . . . ..."
Isidoro Ignacio Ordis. José Lozano, p. . . . .
Isidoro Santa Cruz, c. José Macias. 1,..
Isidro Gomez. José Marcos Urrivarrena, p.
Isidro Sola, p. b. José María Balderas. , , ,
J José María Estepa, p. sin
José María García ".-
... Jaime Pasarell, catedrático
Jaime Soler, p. b. José María Lopez de Goicoe
Joaquin Ballesteros. chea, p. b.
Joaquin Garcia, c. p. José María Gomez, c. m. l.
Joaquin Jimenez Calector. José María Lopez, p. b.,
Joaquin Gutierrez, c. p. José María Oriega y Vallejo.
Joaquin Fernandez Junquera. José María Recasens y Ráfols,
Joaquin Merle, canónigo. C. p.
Joaquin Rodriguez, p. José María Rubio. , º
Joaquin Tellez, p. -
José Martin de Plasencia, c. p.
Joaquin Gaset, p. 3 ee. José Martin de Tome, c. p.
Joaquin Marti. , , . D. José Martinez, ,, , ,
Joaquin Enrique. José Mateos Gago, doctor en
Joaquin Lorente, c. p. teología. , , ,
Jorge Montoya. José Mayo, p. , ,
José Aleixandrí, c. p. José Medina, p, er,
José Alfocea, p. José Mellado, p. .
José Auger, p. José, Merchan Gonzalezl de
José Antonio Delgado. ... Aller, p. b. ... y
José Antonio Garcia Moñino. José Montesinos, c.e.,
José Arcusi, c. p. José Morales. .. . .
José Arroyo, p. - - José Ortiz y Mendieta, c. p.
José Avila, c. p. José Parra, p. , , , , , ,
José Barrachina. * - José Peña, estudiante. . . .
José Beltran, c. p. José Perez. a!.
José Bengoechea, p. José Pijon, p.
José Biscarri, p. José Piqueró, p. ,, ,
José Blanco. José Ramon Acuña, c. p. l.
José de Borja, p. José Raposo, estudiante.
José Cabero, c. p. José Regás, c.e. . . ....
José Campos, p. José Rodriguez. ...
José Cardona, p. José Ruiz Ibeas, canónigo pe
José Chicharro. ... nitenciario. .
José Claudio Cienfuegos, sub José Ubeda y Destrem, p. 3 ee.
diácono. José Dutrem y Moner, p. 2 ee.
José María Corclon, c. p. " José Ferrer, vicario. .
José Costra, c. p. José Cid. - - 1 ,
José del Campo. José Salas. , , , , , , ,
José Deo, p. José Sanchez. --nst
José Diez, estudiante. . José Sansa, p. - -
José Duran, p. . José Santos Sacarra, abad.
José Espar, p. José Ferrero Mayo, p. a
José Esquerra. ... José Torices Borges, p.
José Fernandez y Pastor. José Valladares. . . . .
José Garcia Morentes, c. electo. Jose Vargas. , , , , ,, . . .

J. , , , , , -
D. José Vega, p... Tr
José Vicente Gorfon, p.-
José Villasante. , ,
José Bueno, p. 6 ee... ...
José Escamez, t. c.
José Valderrama, p. ee.
José de la Bosa.
José Almendros.
José Martinez Antequera.
José Sola, c. p.
José Arenas. , ,
José María Gomez. , Juan Nepomuceno Parra, p.
Juan Antonio Acuña, estu
diante.
Juan Aguilera, c. p.
Juan Antonio Cordero, p..
Juan Antonio de Angulo. .
Juan Antonio Salgado. -
Júan Antonio Vizmanos.
Juan Ardoz. i Juan Pelaez, p.
Juan Barbero, p. penitenciario.
Juan Bautista Gurrera, c. p.
Juan Bautista Romero.
Juan Benavides, p.
Juan Bruno de Larroche, p. b.
Juan Callejo.
Juan Canillas, p. . Juan Trapole, p. b.
Juan Capitan, catedrático.
Juan Cardo, c. p.
JuanCarrera Castiñeira Aguiar,
C. ).
Juan &rminas, canónigo.
Juan Cotado, c. p
Juan Cruz de Rentería, c. p.
Juan de Galvez, p. b.
Juan de la Cruz Leiva, p.
Juan del Campo Infante, c. p.
Juan de Leon, p. b.
Juan del Pozo, c. p.
Juan Diez, p.
Juan Felez, c. p.
Juan Francisco Berrueco, . . p.
Juan Garcia. . tico de filosofia.
Juan Garcia, p.
Juan Garcia Criado, p.
Juan Garcia Morico.
Juan Jimenez, p.
Juan Jimenez Jaime.
Juan Jimenez Nieto.
Juan Gomez Pereda, c. p.
Juan Gonzalez, estudiante.
Juan Gregorio Molina, p.
Juan José de Castro, vicario.
Juan José del Prado, c. p.
Juan José de Luna, vice-prior,
Juan José Fernandez.
Juan José Fernandez, p.
Juan José Mancheño, p.
Juan Liborio Carriba.
Juan Manuel Calzada.
Juan de Fabregues, agustino.
Juan Manuel Jarez.
Juan Manuel Mostaza, c. p.
LISTA DESUSCRITORES.
. Juan Maqueda, p.
Juan Martin, p. 2 ee.
Juan Martinez Delgado.
. Juan Miguel, c. p. - Lorenzo Molina.
Juan Miguel Aizpún, vicario.
Juan Miguel de Gorostizaga.
P. JuanDios.
Miguel de a Madre de
. Juan Miguel Guerrero.
Juan Miquelez.
Juan Narvaez, p.
Juan Nepomuceno Lopez, c. p.
Juan Nepomuceno Sacroz, vi
. cario.
- Juan Nieto, p.
Juan Nogues. . D.
Juan Pablo Bermejo,
Juan Pablo Moleres.
Juan Pastor, teniente cura.
Juan Perez, p.
Juan Perez Ostos, p.
Juan Puche y Coria, p.
Juan Rodriguez, c. p.
. Juan Ros.
Juan Soloca, c. p.
Juan Vila, p.
Juan Antonio Merino.
Juan Bta. Jimeno, p. 3 ee.
-
Juan Chanivo.
Juan de la Cruz Morales.
Juan Guasp y Pascual, p. 5 ee.
Juan José Moreli, p. ee.
Juan Manuel Hinojal, p. b.,
p. 2 ee.
Tomás Maria Lopez. ,,
Juan Mata de la Peña, c. p.
Juan Ortiz Flores, c. p.
Juan Valera, p. 2 ee.
P. Julian Alejandre.
D. Julian Baquero, p, y catedrá—
Julian Cadenar, diácono.
Julian Caño y Carcamo, p.
Julian de Mobaran, p. b.
Julian Gutierrez, esiudiante.
. Julian Moaques.
. Julian Martinez, c, p.
Julian Melgosa, c. p.
Julian Blanco, c. e. " ,
Justo Gonzalez, p.
L
. Lázaro Quinlanilla.
Leandro Cabrera, ten. cura.
-
Leocadio Lopez.
Leonardo Jimeno, p.
Leon Balverde, p.
. Leon Escudero, p.
, Leon José Serrano.
Liberato Fernandez, p.
Longinos Goñi, p.
Lorenzo Abad, c. p. . .
D. Lorenzo Coralon.
Lorenzo Herrera.
Lorenzo Maria Gamoza, p.
o
Lorenzo Pons, franciscano.
Lorenzo Rodriguez, esclaus
- , trado. . . ..."
Lucas Sainz, c. p.
Luis Barba, p.
Luis Diaz Saavedra, c. p,
- Luis Fernandez, c. p.
'c Luis Martinez Linares,
Luis Martinez, p. .
Luis Rodriguez, vicario.
Luis Santalla, p.
- M
Manuel Alvarez, estudiante.
Manuel Amoro, c. p
Illmo. Sr. D. Manuel Antonio Ca
a ballero...
D. Manuel Barrera, p.
Manuel Bertol, c. p. , , , , ,
Manuel Castan, p. • º
Manuel Cruz de Rentería, p.
, Manuel Delgado, c. p.
l. Manuel del Pino, p. b.
Manuel Feijoo, p. 3ee.
. Manuel Fortuño, p.
Manuel Garcia llero,
Manuel Garcia, p.
Manuel Gaston y Galan, c. p.
Manuel Jimenez, c. p.
Manuel Gomez Salazar, c. p.
Manuel Gonzalez Cruz.
Manuel Jarez, estudiante.
Manuel José Cobo, c. p.
Manuel José del Anco.
Manuel Lanfranco, p.
Manuel Lezanilla, c. p.
Manuel Lopez.
Manuel Luna, esclaustrado.
Manuel Martinez, canónigo.
Manuel Martinez Fernandez,
C. D.
Mi Martinez Mesias, c. p.
Manuel Martinez Tudela, p.
Manuel Miguel, p. b.
Manuel Ochagavia.
Manuel Ortiz, p.
Manuel Perez Concejo, p.
Manuel Ramirez, p.
Manuel Ramos, c. p
Manuel Rodriguez, estudiante.
Manuel Ruiz, c. p.
Manuel Soriano, c. p.
Manuel Vargas, p. b.
Marcelo Lopez, c. p.
Mariano Rodriguez, p. 12 ee.
Mariano Rodriguez, p., p. 2ee.
Sr. marqués de Salas.
D. Martin Alonso, p. b.
Martin José Solano, p.
Martin Lopez, p.
Martin Lucio, p. b.

D. Martin Miñambres.
Martin Pecondon, canónigo y
vicario.
Mariano Aguilar, catedrático.
Mariano Autoran.
- Mariano Benavides Sanz.-
Mariano Fontena, canónigo.
Mariano Gil, c. p.
Mariano Gimenez de Cisneros.
Mariano Ordas, prior curado.
Dr. D. Mariano Puillat, catedrá
tico.
D. Mariano Sanchez, p.
P. Mariano Soriano.
D. Mariano Useros, c. p.
Mariano Valverde, p.
Mariano Velasco, p.
Mariano Vidal, p.
Mateo Garcia, c. p.
Mateo Pol, c. p.
Mateo Priet0.
Matias Arias Lopez.
Matias Rivera, c. e.
Matias Sarmentero, p.
Matias Vilanova, c. p.
Melchor Garañana, c. p.
Miguel Abela, c. p.
Miguel Baquero, c. p.
Miguel Calabia, magistral.
Miguel de Liébana, vicario.
Miguel Diez, p.
Miguel Fernandez Cid, c. p.
Miguel Garcia, c. p.
MiguelLosadaSotomayor,prior
y cura párroco.
Miguel Luño.
Miguel Martinez Carrasco, p.
Miguel Martinez y Sanz, p.
Miguel Millan.
¿
¿
iguel Pujol y Masiá, p.
Miguel p 7, ee.
Miguel Ruiz Pertinez, c. p.
Miguel Simeon de la Torre, p.
Miguel Sintes, p.
N Pedro Tercero, canónigo
D. N. Quilez, c. p.
P. Narciso Crusat.
D. Narciso Sanz.
Narciso Barrio, c. p.
Narciso Soldevila, p.
Nicolas de García, p.
Nicolas Rial, p. 2. ee.
Nicolas Fabregues, c. m.
Eº
D. Pablo Alonso, c. p.
Pedro Bernardo.
Pablo Elias.
Pablo Homs, catedrático.
Pablo Munichaga, c. p.
Pablo Quevedo, t. c.
Pablo Redous.
Pablo Santos, p.
LISTA DE sUscRItóREs.
D. Pascual Alzamora. c. p...
Pascual Cardona, ce:
a Pascual de la Peña.
P. Pascual Morales, doctor en teo
logia y catedrático de historia.
Pascual Ortega, c. p.ºº
Pascual Perez. - 5
Pascual Sanz, canónigo.
Patricio Paranco, carmelita.
.Paulino Portillo, p.
Pedro Aguilar, c.e.
Pedro Aguilar, pºr en
Pedro del Alba, c. p.
Pedro Alvarez.
. Pedro Alvarez, p.
. Pedro Arizurieta, p.
Pedro Blanco, p.
Pedro José Caballero.
Pedro Celestino Montrel, be
nedictino.
Pedro Delgado.
Pedro Delgado, p.
Pedro Domingo Tejedor.
Pedro Esteban.
Pedro Freixa.
. Pedro Gereg, c. p.
Pedro Gonzalo, p.
Pedro Herrera.
Pedro Yagüe, p.
Pedro La Fuente, p.
Pedro Leal.
Pedro Lopez, c. p.
Pedro Lubias, c, p. 2ee.
Pedro Maria Areitio, p. 2ee.
Pedro Marin.
Pedro Mir, c. p.
Pedro Monguió, c. p., p. 3 ee.
Pedro Antonio Perez.
Pedro Rebolledo, p.
Pedro Regalado Ruiz.
Pedro Rugero, c. p.
¿ Ruiz Martinez.
Pedro Serra.
Pedro Suage, p.
Pedro Suarez, p. 6 ee.
Pedro Suarez Carrasco, c. p.
Pedro Vicario, c. p.
Pelagio Ruiz Tapiador, c. p.
¿ ¿ estudiante.
Policarpo Sigler: . Tomás Cárdenas, p
Prudencio N.
, Tomás Estevez, p.
. Rafael Celma.
Rafael Diaz, p.
Rafael Gimenez, p
Rafael Ladron de Guevara, cu
ra párroco.
Rafael Sanchez Cid.
Rafael Seu, vicario.
Rafael Tena, p.
Rafael Villagrá.
Raimundo Madero, p.
Raimundo Ochoa, p. 8ee.
º
D. Ramon Bastante, canónigo y
catedrático.- a
. Ramon Castello, c. p.
Ramon Hechezarreta, p. 2/ee.
Ramon Lastiesas, c. pº
º Ramon Elordes, c. p. ni
- Ramon Marques, estudiante.
Ramon Martin, p.ºr
Ramon Orozco, º
Ramon Perez, p. ºrºn
Ramon Rivera, ep.rºn
Dr. D. Ricardo Amezaga, o
D. Ramon Ruiz, p
Ramon Valdejo, canónigo.
P. Ramon Valle, vice-rector.
P. Rector de las escuelas pias.
D. Rodrigo Sevilla.
P . Romeral.
) . Roque Falagan, p.
Roque M. Nuñez, c. p.
Roque Pallet, c. p.
Roque Redondo. c. p.
Rosendo Izquierdo, c. p.
8
D . Salvador Fernandez.
Santiago Heydech
Santiago Martinez.
Santiago Martinez, c. p.
Santiago Monge,
Santiago Villabona, c. p., por
3 ee.
SantosCansado, estudiante.
Sebastian Apellaniz, p.
Sebestian Gonzalez Vega.
Sebastian Lorda.
Seminario Conciliar de Ciudad
Rodrigo.
Serafin Gonzalez, estudiante.
Serain Ichaso.
Severiano Moraleda, p. 2 ee.
Severiano Quintana, p.
Sigismundo Amandi.
Silvestre Poza.
Simon Sanchez Peñalver, c. p.
Sinforoso Rillo, c. p.
Sisebuto Blanco, p.
T
D. Tadeo Prieto, p. b.
Tiburcio Prieto, p. vicario.
Tomás Alvarez, abad.
Tomás de la Cámara, p.
Tomás Fernandez.
Tomás Jimenez Blasco.
Tomás Gonzalez.
Tomás Granizo, c. p.
Tomás Gutierrez, p. b.
Tomás Martinez, c. p.
Tomás Natal, p.
Tomás Rodriguez, c. p.
Tomás Sabuco, estudiante.
Torcuato Aguilera, p. b.
 -

- LISTA DESUSCRITORES.

v . Dr. D. Vicencente Miranda, c. p. 3 ejemplares.

D. Valentin Castellanos, p. b. D. Vicente Nuflo. D. Vicente Solano, c. p.
Valentin Diez, c. p. Dr. D. Vicente Papelendi, canó— Vicente Solo. -

Valentin Lledó, p. b. nigo y Vicario capitular en Vicente La Fuente, catedrático.

Ventura Camacho. sede vacante. Vicente Igueras, vicario gral.
Vicente Dominguez, c. p. D. Vicente Patricio Fernandez, Vicente Vidal, p.
Vicente Estevan de Anero, cu- vicario. Sra. Viuda de Razola, p. 12 ee.
ra párroco. Vicente Sanchez, c. p. Viuda de Soria. -

Vicente Ferrer. Vicente Sanchez, p. Viuda de Carrillo y sobrinos,

Vicente Fierro y Perejon, c. p. Vicente Serrano y Garcia, p. por 3ee.
Vicente Galindo, p. Vicente Serrano, p. Viuda de Sta. Maria, p. 2 ee.
Vicente Horcos, c. p., p. 4 ee. Vicente Simon Lorenzo, por ,

o
a
Date Due
BR 95 3O1853

B49 Bergier, N.S.

º Reyes Ticc ººººº! ssisss
º Ae
N/,
 L

43

POSITO

S ITE N
AISLE SECT 010
02 06