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LA IMPORTANCIA MITO DE LAS CREENCIAS

Verdaderamente una creencia es un pensamiento o afirmación, que


refleja la percepción que tenemos sobre algo. Esa percepción a
veces es verdadera y otras no. Las creencias son como filtros de la
realidad; no vemos el mundo como es sino como lo percibimos a
través de nuestras creencias. Tampoco nos vemos a nosotros
mismos como realmente somos sino como nos han dicho que
somos o que deberíamos ser.

Las creencias se grabaron en nuestra mente desde el momento de


nuestra concepción y durante toda la gestación a través de todas
las experiencias sensoriales y emocionales de la madre. Es
principalmente hasta los 7 años que nuestra mente sigue
registrando información a una velocidad increíble y de una manera
abundante.

Es en esta etapa que aprendemos programas motores complejos


tales como hablar, gatear, caminar, correr, saltar los cuales
usaremos posteriormente para la vida de manera automática.
También aprendemos sobre nosotros mismos, sobre lo que somos
y de lo que somos capaces, de lo que merecemos, sobre lo que es
el amor, el dinero, la vida. Esta información proviene de nuestro
entorno más cercano, padres, abuelos, familia, escuela, la
sociedad, etc.

Muchas de esas creencias nos sirven para vivir la vida como por
ejemplo que el fuego quema, que si juego con un cuchillo puedo
herirme. Sin embargo hay otras creencias que en lugar de
ayudarme a vivir funcionan como un saboteador y me alejan de mi
poder personal y de mis metas. Algunas creencias limitantes
pueden ser: el amor duele, la vida es difícil, no sirvo para nada, de
algo me he de morir, más vale ser pobre y honesto que rico, etc.

Es bueno recordarte que no eres responsable de la información que


ingresó en tu mente. Para ello puedes elegir reemplazar aquellas
creencias limitantes por creencias potenciadoras como: la vida es
un lugar seguro, el amor me da felicidad, hago siempre lo mejor
que puedo, gano dinero de manera fácil y divertida, etc.

La Mente Subconsciente te protege manteniéndote separado de


todas las experiencias "peligrosas". En realidad es nuestra mejor
amiga. Sólo necesitamos comunicarnos con ella y darle nueva
información!
"El subconsciente es un procesador de información mucho más
rápido que la mente consciente y utiliza entre el 95% y el 99% del
tiempo la información ya almacenada desde nuestra niñez como un
referente. Por eso cuando decidimos algo conscientemente como,
por ejemplo, ganar más dinero, si nuestro subconsciente contiene
información de que es muy difícil ganarse la vida, no lo
conseguiremos.

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