Ponga los dedos de una mano (menos el pulgar) en cuatro globos de aire.

Explíqueles que usted quiere inflar globos para ellos. Comience a soplar en
su pulgar. Cada momento mire si los globos se han inflado algo. Siga
haciéndolo un buen rato, con una cara de confusión al no lograr lo que
quiere. Pregunte: ¿Qué pasa? ¿Por qué no se están inflando? ¡No
entiendo! Quiero inflar estos globos para ustedes. Sé que para inflar un
globo tiene que estar conectado y uno tiene que soplar en él. Entonces,
¿por qué no se están inflando? (Ellos deben explicar el problema).

Infle unos globos mientras explica que a veces la gente piensa que puede
estar conectada en cualquier forma para recibir el soplo del Espíritu de
Dios. Pero el ejemplo nos muestra que estar conectado en una forma
incorrecta no nos ayuda. La Biblia nos dice que para desarrollar fruto en la
vida, tenemos que estar conectados a la vid, que es Jesucristo. ¿Pero qué
significa estar conectado a Cristo?

Uno solo puede inflar un globo si está "conectado" a la boca para poder
recibir el aire. Así es con el fruto del Espíritu. Uno tiene que estar conectado
por la fe a Jesús para poder recibir el soplo (la ayuda) del Espíritu y así ver
crecer el fruto en la vida.

AMOR: La persona que agrada a Dios producirá amor. Este amor no es como
el deseo que tenemos por los juguetes, la pizza o los dulces. Esta clase de
amor significa que queremos lo mejor para los demás—sí, incluso para la
gente a quien es difícil amar, como aquellos que te tratan mal en la escuela.
Dios es nuestro ejemplo de esta clase de amor. Dios ama a la gente que no
Le ama o incluso que Le odia. Él les da los rayos del sol, la lluvia y la comida
(Mateo 5:44-45). Él quiere que amemos a otros de tal manera. ¿Cómo nos
mostró Dios Su amor?

GOZO: No podemos estar felices todo el tiempo. Algunas veces nos

sentimos tristes, molestos, temerosos, etc. El gozo es único ya que puede ser
un sentimiento de satisfacción incluso cuando estamos tristes, temerosos o
desalentados. Cuando seguimos al Señor, sentimos gozo ya que tenemos
muchas cosas por las cuales estar agradecidos.

 Tenemos gozo porque Dios nos ama.

 Él escucha nuestras oraciones.
 Tenemos una familia cristiana maravillosa, y tenemos la esperanza de
vivir con Dios por siempre en el cielo.

Mientras el creyente mira a Jesús y confía en El, los problemas de la vida no lo

abruman. Sigue lleno del gozo del Señor, porque su alegría no depende de cómo
van las cosas por fuera; su alegría viene de Jesús. (Muestre el globo mientras lo
atraviesa con la aguja.) ¿Ven cómo los problemas no le han abrumado? Sigue
lleno de gozo porque confía en que Jesús le ayudará en todos sus problemas. B.
(Cuando el globo explota, explique esta parte.) Pero cuando el creyente deja de
mirar a Jesús y de confiar en El, y empieza a fijarse en sus problemas y a