Sei sulla pagina 1di 10

El recurso de queja ante la Corte Suprema de Justicia

de la Nación
por TRISTÁN GÓMEZ ZAVAGLIA
14 de Septiembre de 2011
www.saij.jus.gov.ar Sintesis del cap. VII "Competencias y Atribuciones de la Corte Suprema de Justicia de la
Nación" de los Dres María Cecilia Hockl y David Duarte, Editorial Legis, pág. 481 y ss., 2006.
Id SAIJ: DACF110127

I.- Introducción.- Frente al rechazo del recurso extraordinario o del recurso ordinario de apelación por parte del
tribunal superior de la causa diversas normas procesales autorizan a interponer el recurso de queja, de hecho o
directo ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Antes de efectuar cualquier análisis debemos destacar la importancia que tiene este recurso a fin de asegurar la
supremacía constitucional (art. 31 C.N.), toda vez que es la única vía legal para llegar a la Corte Suprema en los
casos en que los tribunales inferiores deniegan la vía prevista en el art. 14 de la ley 48.(1) Cualquiera sea el
fundamento dado por el tribunal de la causa para rechazar el recurso extraordinario o el recurso ordinario de
apelación, la única vía legal para revisar tal denegación es el recurso de queja y no la interposición de otro
recurso extraordinario. Tampoco es posible interponer recurso de apelación contra un auto denegatorio del
otorgamiento del recurso extraordinario.(2) II.- Plazo.

El plazo para interponer el recurso de queja es de cinco días, los que deberán contarse a partir del día siguiente
de practicada la notificación del auto denegatorio del recurso extraordinario (arts. 285, 282 y 135 inc. 14
CPCCN). En efecto, la parte interesada, deberá interponer el aludido recurso directamente ante la Corte, que es
el Tribunal llamado a decidir sobre su viabilidad (Fallos: 306: 630; 312: 991 y 323: 831).

Cabe recordar que este plazo podrá verse incrementado de conformidad con lo prescripto por el artículo 158 de
la ley adjetiva, que lo amplía en virtud de la distancia a razón de un día por cada 200 km o fracción que no baje
de 100 km. Para evitar cualquier problema de interpretación al respecto, en la acordada 50/86 (Fallos: 308:
1523), se dispuso que la distancia que se tendrá en cuenta será la más larga que resulte de la comparación
entre las medidas por vía férrea y por ruta terrestre.

Es importante destacar que el Tribunal ha dicho que para computar la ampliación de los plazos en razón de la
distancia a los efectos de la interposición del recurso de queja por denegación del extraordinario, debe tenerse
en cuenta la planilla que exhibe la Mesa General de Entradas de la Corte (Fallos: 306: 558; 326: 728).

También es aplicable el denominado "plazo de gracia" previsto en el artículo 124 del CPCCN, de modo tal que la
presentación directa podrá efectuarse hasta el día hábil inmediato al vencimiento de los plazos previstos en los
arts. 282 y 158 CPCCN dentro de las dos primeras horas del despacho.

Vencido el plazo acordado por la ley, la presentación directa será extemporánea, dado que no se admiten
presentaciones tardías, ni siquiera con demora de minutos (Fallos: 289: 196; 296: 251; 307: 1016; 316: 246 y
2180; 319: 2446 y 326: 3895) y ello por razones de seguridad jurídica fundadas en el principio de perentoriedad
de los términos.

Finalmente es dable destacar que no inciden en el cómputo de los plazos los feriados locales (Fallos: 277: 430;
299: 44; 302: 1140; 312: 778), a diferencia de lo que acontece en cuanto al recurso extraordinario federal, dado
que este último se debe interponer ante el superior tribunal de la causa (art. 257 CPCCN).

III.- Interposición de la queja. Trámite.

El recurrente al deducir el recurso de hecho, deberá dar estricto cumplimiento a lo dispuesto en la acordada N° 4
CSJN, del 16 de marzo de 2007 (reglamento sobre los escritos de interposición del recurso extraordinario y del
recurso de queja por denegación de aquél).

En lo que hace al objeto del presente trabajo debemos señalar que en la aludida acordada se establecieron las
siguientes reglas para la interposición de la queja por denegación del recurso extraordinario:

- El recurso de queja por denegación del recurso extraordinario federal deberá interponerse mediante un escrito
de extensión no mayor a diez (10) páginas de veintiséis (26) renglones, y con letra de tamaño claramente legible
(no menor de 12).

- Contendrá una carátula en hoja aparte en la cual deberán consignarse exclusivamente los siguientes datos: a)
el objeto de la presentación; b) la enunciación precisa de la carátula del expediente; c) el nombre de quien
suscribe el escrito; si actúa en representación de terceros, el de sus representados, y del letrado patrocinante si
lo hubiera; d) el domicilio constituido por el presentante en la Capital Federal; y e) la indicación del carácter en
que interviene en el pleito el presentante o su representado (como actor, demandado, tercero citado, etc.) y,
además, la mención del organismo, juez o tribunal que dictó la resolución denegatoria del recurso extraordinario
federal, como así también de los que hayan intervenido con anterioridad en el pleito; g) la fecha de notificación
de dicho pronunciamiento; h) la aclaración de si se ha hecho uso de la ampliación del plazo prevista en el art.
158 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación; i) en su caso, la demostración de que el recurrente está
exento de efectuar el depósito previsto en el art. 286 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.

- Asimismo, el recurrente, en las páginas siguientes deberá refutar en forma concreta y razonada, todos y cada
uno de los fundamentos independientes que den sustento a la resolución denegatoria. El escrito tendrá esa
única finalidad y no podrán introducirse en él cuestiones que no hayan sido planteadas en el recurso
extraordinario.

- Luego, en el art. 7° se establece que el escrito de interposición de la queja deberá estar acompañado por
copias simples, claramente legibles, de: a) la decisión impugnada mediante el recurso extraordinario federal; b)
el escrito de interposición de este recurso; c) el escrito de contestación del traslado previsto en el art. 257 del
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación; d) la resolución denegatoria del recurso extraordinario federal.
Con el agregado de las copias a que se refiere este artículo no podrán suplirse los defectos de fundamentación
en que hubiera incurrido el apelante al interponer el recurso extraordinario.

- A continuación, en los artículos 8 a 12 del reglamento aprobado por la acordada 4/2007 se establecen las
siguientes observaciones generales:

8. El recurrente deberá transcribir -dentro del texto del escrito o como anexo separado- de todas las normas
jurídicas citada que no estén publicadas en el Boletín Oficial de la República Argentina, indicando, además, su
período de vigencia.

9. Las citas de fallos de la Corte deberán ir acompañadas de la mención del tomo y la página de su publicación
en la colección oficial, salvo que aun no estuvieran publicados, en cuyo caso se indicará su fecha y la carátula
del expediente en el que fueron dictados.

10. La fundamentación del recurso extraordinario no podrá suplirse mediante la simple remisión a lo expuesto en
actuaciones anteriores, ni como una enunciación genérica y esquemática que no permita la cabal comprensión
del caso que fue sometido a consideración de los jueces de la causa.

11. En el caso de que el apelante no haya satisfecho alguno o algunos de los recaudos para la interposición del
recurso extraordinario federal y/o de la queja, o que lo haya hecho de modo deficiente, la Corte desestimará la
apelación mediante la sola mención de la norma reglamentaria pertinente, salvo que, según su sana discreción,
el incumplimiento no constituya un obstáculo insalvable para la admisibilidad de la pretensión recursiva.

Cuando la Corte desestime esas pretensiones por tal causa, las actuaciones respectivas se reputarán
inoficiosas. Del mismo modo deberán proceder los jueces o tribunales cuando denieguen la concesión de
recursos extraordinarios por no haber sido satisfechos los recaudos interpuestos por esta reglamentación.

En caso de incumplimiento del recaudo de constituir domicilio en la Capital Federal se aplicará lo dispuesto por
el art. 257 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.

12. El régimen establecido en este reglamento no se aplicará a los recursos interpuestos in forma pauperis.

Unos meses antes del dictado de la acordada 4/2007 habíamos sugerido algunos de los aspectos que hoy se
ven plasmados en la aludida acordada (3), sobre la base de la jurisprudencia predominante que venía
imperando en la materia.

Creemos que la Corte, sobre la base de su experiencia, entendió necesario sistematizar y uniformar el criterio a
seguir respecto de los recaudos necesarios para la admisibilidad formal de la presentación directa.

En este sentido, resulta mucho más ágil y prolijo -tanto para el litigante como para el Tribunal- consignar ciertos
aspectos (vgr. carátula dispuesta en el artículo 5°, transcribir las normas jurídicas que se citan y que no estén
publicadas en el B.O., art. 8°, citas de fallos de la Corte mencionando el tomo y la página de su publicación o
bien la carátula del expediente en el que fueron dictados, art. 9°).

Respecto de la exigencia establecida en el art. 6°, estimamos que la Corte debe haber entendido necesario
establecer concretamente que el litigante debe refutar el auto denegatorio del recurso extraordinario por la gran
cantidad de recursos que se presentaban ante sus estrados sin dar cumplimiento a este requisito. En cuanto a
la prohibición de introducir cuestiones que no hayan sido planteadas en el recurso extraordinario, entendemos
que no resultaba necesaria una manifestación expresa al respecto (arg. art. 280, cuarto párrafo de la ley
adjetiva).

Luego, el requisito de acompañar copias (art. 7°) facilitará enormemente la tarea del Tribunal que contará con
mejores elementos a la hora de resolver el recurso. Con esta incorporación en forma expresa ha quedado de
lado alguna jurisprudencia anterior que sostenía que no resultaba indispensable la presentación de recaudos
tales como la presentación de copias de la sentencia recurrida, del escrito de interposición del recurso y del auto
denegatorio, ni de otro recaudo (Fallos: 306: 265).

Asimismo, es dable destacar que el requisito de autosuficiencia tiene fronteras bien demarcadas.

Desde el punto de vista formal, la extensión del escrito mediante el cual se interponga el recurso de queja no
podrá ser superior a diez páginas de veintiséis renglones y con una letra que no debe ser menor a de doce (art.
4°). Desde el punto de vista procesal -mediante el art. 10- se dejó en claro que la fundamentación del recurso
extraordinario no podrá suplirse mediante la simple remisión a lo expuesto en actuaciones anteriores, ni con una
enunciación genérica y esquemática que no permita la cabal comprensión del caso que fue sometido a
consideración de los jueces de la causa. Esta disposición encuentra su razón de ser en la gran cantidad de
casos que resultaban rechazados por la falta de cumplimiento del requisito de fundamentación autónoma y,
estimamos, que el alto Tribunal entendió necesario establecerlo por escrito en la reglamentación.

Finalmente, el art. 11, sigue los lineamientos establecidos en el art. 280 del Código Procesal Civil y Comercial, y
establece que la falta de cumplimiento de alguno de los recaudos establecidos en la reglamentación sellarán la
suerte adversa del apelante en el recurso intentado, mediante la sola invocación de la norma reglamentaria.

No obstante lo señalado precedentemente no podemos pasar por alto la facultad conferida por el art. 285 del
código citado: el Tribunal podrá exigir la presentación de copias. Tampoco se podrá perder de vista que el auto
que disponga dicho requerimiento se le notificará al recurrente de acuerdo a lo previsto en el art. 133 del
CPCCN que prevé como regla en "todas las instancias" la notificación por ministerio de la ley, lo que
naturalmente incluye aquella que se inicia con la presentación del recurso de hecho (4).

Esta circunstancia es de especial relevancia dado que en los recursos de hecho en los que se requiera la
presentación de recaudos, la providencia respectiva quedará notificada de acuerdo con el principio indicado. De
modo tal que es importante un especial cuidado en desplegar la actividad procesal requerida por la Corte para
evitar la caducidad de la instancia (art. 310 CPCCN).(5) Tampoco está de más recordar que las normas del
Código Procesal Civil y Comercial de la Nación atinentes a la caducidad de la instancia, son aplicables a los
recursos deducidos ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, aun cuando se originen en un pleito
laboral.(6) Muchas veces sucede que los recurrentes basan sus argumentos en la información que le habría
suministrado la Mesa General de Entradas del Tribunal o explican que el expediente nunca estuvo a disposición,
pero lo cierto es que el requerimiento de copias por parte de la Secretaría del Tribunal, no se puede tornar en
una cuestión sorpresiva para un letrado diligente. Más aun, estas manifestaciones deben encontrar el
correspondiente respaldo en el libro de asistencia previsto por el art. 133 inc. 2º del CPCCN (7).

La presentación directa deberá efectuarse de conformidad con las formalidades establecidas en los artículos 46
y 47 del Reglamento para la Justicia Nacional, atento a la remisión efectuada por el art. 118 del CPCCN.

La falta de firma en el recurso de hecho podrá ser subsanada de conformidad con lo dispuesto en el art. 57 del
CPCCN: se deberá suscribir el escrito respectivo ante el secretario o el oficial primero, quien certificará esta
circunstancia en el expediente o se efectuará por separado la ratificación correspondiente. Todo ello deberá
realizarse en el breve plazo que fije el Tribunal al advertir esta situación o de inmediato si es advertida por el
litigante.

También es viable la presentación efectuada mediante un gestor cuando deban realizarse actos procesales
urgentes y existan hechos o circunstancias que impidan la actuación por la parte que ha cumplirlos (art. 48
CPCCN). Pero esta clase de presentaciones encuentra una doble limitación desde el punto de vista formal. Por
un lado, la actuación realizada por el gestor, obviamente, debe deducirse dentro del plazo para interponer la
queja. Y, por el otro, el Tribunal deberá evaluar estrictamente "la seriedad del pedido" dado que con la
interposición del recurso de queja tiene lugar el nacimiento de un trámite que puede afectar la estabilidad de la
sentencia dictada y el derecho por ella declarado. Ello hace desaconsejable que la resolución de esa instancia
permanezca indefinida en el tiempo y justifica una interpretación estricta de las circunstancias invocadas por el
gestor. (8) Una vez admitidas las razones de urgencia, quien se presentase bajo estas condiciones deberá
acompañar los instrumentos que acrediten la personería o bien la parte deberá ratificar esta gestión en el plazo
de cuarenta días hábiles, produciéndose la nulidad de lo actuado por el gestor por el solo vencimiento del plazo
sin que se requiera intimación previa. En el caso de que se interponga un recurso de reposición contra la
sentencia desestimatoria del la Corte, esta deberá ser más estricta aun por cuanto no tendría razón de ser que
una queja en esa situación quede sin resolver. Más aun, podría tratase de una maniobra dilatoria.
Con relación al bono de derecho fijo, previsto en el art. 51 inc. d) de la ley 23.187 consideramos que el mismo
sólo se debe presentar junto con la queja si esta constituye la primera intervención del letrado firmante. En la
práctica son casi inexistentes las intimaciones relativas a este tema.

IV.- La solicitud de remisión del expediente principal.

Otra cuestión contemplada en la ley adjetiva -art. 285 del CPCCN, segundo párrafo- es la facultad de la que
dispone el Tribunal de efectuar la solicitud de las actuaciones principales.

De esta circunstancia no siempre derivará la apertura de la instancia extraordinaria. La recepción de los autos
principales por la Corte sólo puede vincularse con la conveniencia -a criterio del Tribunal- de efectuar un estudio
más profundo del caso.

El pedido de los autos principales exige la conformidad de tres jueces del Tribunal, de acuerdo con lo
establecido en la acordada 217/04 del 24 de febrero de 2004.

La providencia que así lo dispone debe ser suscripta por el Secretario a cargo de la Secretaría Judicial donde
tramita la causa, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 88 y 89 del Reglamento para la Justicia
Nacional.

Cuando se decida conferir vista al Sr. Procurador General de la Nación (art. 33 de la ley 24.946) o al Defensor
Oficial ante la Corte (art. 51 y sig. ley 24.946 y resolución 2658/97), se deberá transitar por idéntico camino
(conformidad de tres jueces y la providencia firmada por el titular de la secretaría en la que tramita la causa).

La demora de los jueces de la causa en cumplir con la remisión del expediente según lo dispuso por la Corte,
puede dar lugar a la aplicación de diversas medidas, incluso conminatorias (9).

V.- La mera interposición del recurso de queja no suspende la ejecución. Facultades del Tribunal.

Tal como se desprende del último párrafo del artículo 285 del CPCCN "... mientras no se haga lugar a la queja
no se suspenderá el curso del proceso...". La letra de este artículo parece ser categórica; sin embargo y sin
perjuicio del legítimo derecho que le asiste a la parte recurrida según la normativa procesal de continuar con la
ejecución (art. 285, cuarto párrafo), cabe considerar que de prosperar el recurso promovido al propio tiempo que
se ejecutó la sentencia ante los tribunales de la causa podrían generarse situaciones de hecho quizás
irreparables en los bienes del recurrente afectados por la sentencia.

Por tales motivos y, frente a situaciones de extrema excepcionalidad, la Corte optó por la vía de la suspensión
de la ejecución de la sentencia (10) Parte de la doctrina sostiene que la suspensión del trámite muchas veces se
produce de hecho cuando el a quo remite las actuaciones principales a la Corte para resolver (11). De tal modo
el letrado que tenga interés en llevar adelante la ejecución deberá, en el tribunal de origen, obtener las copias de
las piezas pertinentes para su certificación y posterior formación del incidente de conformidad con lo prescripto
en el artículo 177 del CPCCN.

Resaltamos que dicha diligencia deberá ser llevada a cabo por el interesado en el tribunal de origen, dado que
la Corte por regla general no acepta presentaciones de la parte "recurrida" en la queja y, además, no certifica
fotocopias de actuaciones que no tramitaron ante sus estrados (12). En esos casos se estila la devolución de la
presentación bajo constancia por la Mesa de Entradas Judicial del Tribunal.

Según la jurisprudencia constante del Tribunal la mera remisión de los autos principales no suspenderá el curso
del proceso.
Luego, si por circunstancias excepcionales expuestas en el recurso extraordinario y mantenidas en la
presentación directa que puedan, prima facie, involucrar cuestiones de orden federal, la Corte se ha inclinado
por declarar procedente la queja y decretar la suspensión del curso del proceso sin que este implique
pronunciamiento sobre el fondo del recurso (Fallos: 295: 658; 297: 558; 308: 249; 310: 2241; 317: 1447 y 323:
3085).

VI.- La solicitud de homologación de un acuerdo entre las partes.

Puede suceder que las partes arriben a un acuerdo extrajudicial y la queja se encuentre pendiente de
resolución.

En ese caso, si se encuentra la presentación directa a estudio del Tribunal conjuntamente con los autos
principales, corresponde la remisión de los mismos al Juzgado de Primera Instancia en razón de haberse
agotado la competencia del superior tribunal de la causa con el dictado de la sentencia definitiva.

Al respecto debemos recordar la doctrina sentada en la causa "Grassino, José Luis c/ Corporación Argentina de
Productores de Carnes", sentencia del 12 de noviembre de 1981 (Fallos: 303: 1736), en cuyo considerando
séptimo se destacó que "...a tales efectos, cabe entender que el alcance del auto de fs...no debe extenderse
más allá del ámbito en que ha sido dictado, esto es, que la incompetencia debe considerarse declarada sólo
respecto de la Sala y con relación a las particulares circunstancias que se presentó el convenio, cuando ya se
había dictado la sentencia definitiva para la cual se abriera la instancia de alzada. Mas nada impide que dicho
convenio sea sometido al juez de primera instancia, que es el órgano jurisdiccional que conserva competencia
para conocer en lo atinente a la ejecución de aquella sentencia, para que éste resuelva los efectos que quepa
otorgar al acuerdo presentado por las partes y a la posterior rectificación de la actora...".

De este modo se remitirán los autos al juzgado de primera instancia a fin de que proceda -en el caso de ser
viable- a homologar el acuerdo al que arribaron las partes, debiendo informar, oportunamente, a la Corte acerca
del resultado que motivó tal remisión para que ésta ordene el archivo de la queja. En caso contrario se
devolverán los autos principales para que sigan según su estado.

En el supuesto de que la manifestación se realice en la presentación directa y los autos principales no se


encuentren en la sede del Tribunal, el recurrente deberá informar al mismo una vez homologado el acuerdo
circunstancia que -obviamente- tornará inoficioso el pronunciamiento en aquella.

VII.- La resolución en la queja.

Una vez cumplidos los requisitos formales el expediente estará en condiciones de ser resuelto por la Corte quien
resolverá sobre el fondo del asunto del recurso extraordinario federal. Así podrá desestimar la queja, declarar
admisible el recurso extraordinario y admitir la queja y dictar simultáneamente sentencia en la causa.13 Es dable
poner de manifiesto que en el ínterin por lo general no se admitirán copias que no hayan sido requeridas por el
Tribunal dado que este tipo de presentaciones se estarían efectuando fuera del plazo para interponer la queja
(arts. 285 y 282 segundo párrafo del CPCCN), ni tampoco la alegación de hechos nuevos en virtud de la
prohibición expresa que se encuentra contemplada en el cuarto párrafo del artículo 280 del CPCCN.

Salvo en los supuestos de rechazo in limine, se dará vista al Procurador General (art. 33 de la ley 24.946), la
que deberá ser autorizada por tres jueces del Tribunal, como ya lo mencionamos oportunamente (resolución
217/2004).

Si la Corte hace lugar a la queja y, en consecuencia declara mal denegado el recurso extraordinario, ésta será
glosada a los autos principales y posteriormente "refoliada". Luego se notificará a las partes de la decisión
adoptada y también al Sr. Procurador General ante la Corte.

Señala Sagües (14) que el actual sistema afecta el principio de igualdad de las partes ya que la recurrente pudo
alegar contra el auto denegatorio del recurso extraordinario al promover la queja, pero la otra no estuvo en
condiciones de sostenerlo. Concluye sus argumentos resaltando que para purgar "...tal inconstitucionalidad
sería de interés que la Corte diese un traslado a la recurrida, trámite que, es cierto, alongaría la tramitación de
las quejas, pero sanaría el procedimiento...".

No coincidimos con los argumentos precedentemente mencionados por tres motivos: en primer lugar la
"recurrida" tuvo oportunidad de hacerse oír con motivo de contestar el traslado previsto en el artículo 257 del
CPCCN, en segundo lugar la queja no puede "mejorar" el recurso extraordinario federal, ni introducir cuestiones
que no fueron tratadas ante los jueces de la causa -salvo el supuesto bien puntual de la arbitrariedad sorpresiva-
y en tercer lugar y, tal como lo adelanta el autor citado, esto prolongaría el trámite de las causas ante el máximo
Tribunal de la Nación cuya actuación está destinada a supuestos bien específicos (15).

Finalmente el art. 285 CPCCN dispone que "...si la queja fuere declarada procedente y se revocare la sentencia,
será de aplicación el art. 16 de la ley 48...". Recordemos que el artículo mencionado a su vez dispone que "En
los recursos de que tratan los dos artículos anteriores, cuando la Corte Suprema revoque, hará una declaratoria
sobre el punto disputado, y devolverá la causa para que sea nuevamente juzgada: o bien resolverá sobre el
fondo, y aun podrá ordenar la ejecución especialmente si la causa hubiese sido una vez devuelta por idéntica
razón".

VIII.- Planteos contra la decisión del Tribunal.

Como norma casi general podemos destacar que el Tribunal se ha encargado de señalar que sus sentencias no
son susceptibles de reposición, revocatoria o nulidad (16). Pero frente a supuestos realmente excepcionales se
abrió paso a la aplicación del supuesto antagónico. Tal es el caso de los precedentes que se registran en la
colección de Fallos: 310: 858; 295; 753; 293: 171 y 292: 566 entre muchos otros.

Así en Fallos: 313: 1461 la Corte sostuvo en el considerando 3° "...Que de acuerdo con una jurisprudencia
tradicional, las sentencias del Tribunal no son susceptibles del referido recurso (Fallos: 302: 1319), pero también
es cierto que este principio reconoce excepciones en supuestos que presenten caracteres en verdad
extraordinarios (véanse, entre otras, las sentencias de Fallos: 136: 244; 212: 324; 216: 55; 217: 544; 296: 241;
303: 1072 y 1348; 310: 858 y otros muchos). Ha de tratarse de situaciones serias e inequívocas que ofrezcan
nitidez manifiesta como la que resulta v.gr. del precedente "Delicia Rosa Rivero" (27 de octubre de 1976, Fallos:
296: 241) en que el Tribunal procedió de oficio, en resguardo de los valores jurídicos cuya tutela le ha sido
confiada: llegados por segunda vez los autos a la Corte, y sin que mediara objeción ni petición de nadie,
comprobó aquella existencia de "manifiesta contradicción" entre los fundamentos y la parte resolutiva de un fallo
suyo, anterior, y sin más, reconoció el error y lo enmendó. Al hacerlo, expuso una razón cuyo alcance es
plausible: corresponde la rectificación espontánea porque -dice el consid. 5° de la sentencia- 'los jueces deben
determinar la verdad sustancial, pues sólo así se presta adecuado servicio a la justicia'. Más recientemente, en
el caso 'José Luis Felcaro' (Fallos: 310: 858), se comprobó que la sentencia contenía un 'error esencial', toda
vez que se remitía al pronunciamiento de otra causa que aún no había sido formalmente dictado: en tales
condiciones, el Tribunal, también de oficio, declaró la nulidad de dicha sentencia, conforme a lo establecido en el
art. 172 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación...".(17) Más recientemente el Tribunal frente a la
interposición de un recurso de revocatoria en el que se había desestimado la queja con fundamento en que el
recurso extraordinario no se dirigía contra una sentencia definitiva o equiparable a tal, destacó lo siguiente:
"...Que este Tribunal ha resuelto en reiteradas oportunidades que sus sentencias no son susceptibles de los
recursos de reconsideración, revocatoria o nulidad, pero ese principio reconoce excepciones cuando se trata de
situaciones serias e inequívocas que demuestren con nitidez manifiesta el error que se pretende subsanar
(Fallos: 315: 1431 y 318: 2329)...Que en autos se encuentra configurada esta última hipótesis, toda vez que el
fallo del 19 de marzo de 2002 se omitió valorar que, en función de las particulares circunstancias del sub lite, la
decisión apelada generada consecuencias de insuficiente o imposible reparación ulterior que la convertían en
definitiva a los fines del art. 14 de la ley 48. Así lo entendió implícitamente este Tribunal al fallar una causa que
guarda sustancial analogía con la presente (Fallos: 324: 3074)...".(18) IX.- El depósito en la queja.

A.- Distintos supuestos y excepciones.

Dispone el artículo 286 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación que "Cuando se interponga recurso
de queja ante la Corte Suprema de Justicia por denegación del recurso extraordinario, deberá depositarse a la
orden de dicho tribunal la suma de (hoy $5.000, ver acordada CSJN 2/2007). El depósito se hará en el Banco de
depósitos judiciales.

No efectuarán este depósito los que estén exentos de pagar sellado o tasa judicial, conforme a las disposiciones
de las leyes nacionales respectivas.

Si se omitiera el depósito o se lo efectuare en forma insuficiente, se hará saber al recurrente que deberá
intimarlo en el término de cinco días. El auto que así lo ordene se notificará personalmente o por cédula".

Tal como se desprende del artículo transcripto el depósito deberá acreditarse juntamente con el escrito de
interposición de la queja. El mismo se depositará en la cuenta de la Corte Suprema (cuenta nº 289/1) en el
Banco de la Ciudad de Buenos Aires y no efectuarán este depósito aquellos que estén exentos de pagar sellado
o tasa judicial conforme a las disposiciones de las leyes nacionales respectivas (ver art. 13 de la ley 23.898 (19),
leyes 23.966, 23.990, 24.073 y decretos 114/93, 2291/94). También se encuentra exentos del pago del depósito
los trabajadores que recurren en queja en su condición de tales, todo ello en virtud de las disposiciones antes
mencionadas a la que, además, deberemos sumar la norma del art. 20 LCT conocida como principio de
gratuidad. (20) También se encuentran exentos de integrar el depósito aquellos que hayan obtenido el beneficio
de litigar sin gastos el que podrá ser promovido "...hasta la audiencia preliminar o la declaración de puro
derecho, salvo que se aleguen y acrediten circunstancias sobrevinientes. En todos los casos la concesión del
beneficio tendrá efectos retroactivos a la fecha de promoción de la demanda, respecto de las costas o gastos
judiciales no satisfechos" (art. 84 del CPCCN in fine).

Cuando se invoque la existencia de beneficio de litigar sin gastos en una queja deberá acreditarse la concesión
y el alcance del mismo y, frente al supuesto que el mismo se encuentre en trámite, habrá que poner especial
cuidado a fin de evitar la caducidad de la instancia en la queja (art. 310 inc. 2º). Para ello se deberá informar al
Tribunal acerca del trámite del incidente respectivo cada tres meses, lapso durante el cual quedará suspendido
de hecho el tratamiento del recurso de queja.(21) Si se omitiera el depósito o se lo efectuare en forma
insuficiente, la secretaría interviniente deberá hacer saber al recurrente que deberá integrarlo en el término de
cinco días. El auto respectivo se notificará personalmente o por cédula. En caso de incumplimiento de este
requisito, el Tribunal tendrá por desistida la presentación directa.

Si la queja fuese declarada admisible por la Corte, el depósito se devolverá al interesado y si fuere desestimada
o se declarase la caducidad de la instancia el depósito se perderá (arts. 286 y 287 CPCCN). En el ultimo caso la
Corte dispondrá de las sumas que de este modo se recauden para la dotación de las bibliotecas de los
tribunales nacionales de todo el país (art. 287 cod. cit). Por aplicación analógica de este principio se da por
perdido el depósito en el caso de desistimiento expreso del recurso.(22) Y, finalmente, frente al caso de quiebra
de la recurrente -sin que se haya dado cumplimiento a lo dispuesto en el art. 286 CPCCN-, el Tribunal hará
saber esta circunstancia al juez comercial para que el depósito se haga efectivo en la oportunidad adecuada.

B.- El Estado Nacional como recurrente. La acordada 47/91.

En lo concerniente a la obligación de ingresar los aportes previstos en el art. 286 del CPCCN, la acordada 47/91
establece pautas relativas a la percepción del depósito para aquellos casos en que resulta deudor el Estado
Nacional, sus entes autárquicos, provincias o municipalidades. A los efectos de cumplir con el recaudo
establecido en la norma citada, los obligados aludidos podrán diferir el pago del depósito para el año
correspondiente al siguiente ejercicio financiero a fin de que pueda ser previsto en el proyecto de presupuesto
respectivo. Para tener por ejercida la opción de diferimiento deberán acogerse a los términos de la acordada
mencionada al interponer la queja y acompañar dentro de quinto día la constancia documental respecto del
correspondiente requerimiento de previsión presupuestaria (23). El incumplimiento de este recaudo importa la
caducidad del acogimiento y la consiguiente intimación para efectivizar el depósito dentro de quinto día. En
oportunidad de efectivizarse el depósito debe computarse los intereses equivalentes a la tasa promedio de la
caja de ahorro común que publique el Banco Central de la República Argentina.

Notas al pie:

(*)Este artículo tiene como base el capítulo VII del Libro "Competencias y Atribuciones de la Corte Suprema de
Justicia de la Nación", Hockl-Duarte, Ed. Legis, Buenos Aires-Bogotá-Caracas -Lima-Mexico D.F.-Santiago y
Miami, 2006, páginas 481 y ss.

1) Ver Doctrina 1975, pág 456: "El depósito previo en las quejas ante la Corte Suprema Nacional (Necesidad de
su reforma) por Eduardo Vocos Conesa.

2) Ver De Santo Víctor "Tratado de los Recursos" Tomo II -segunda edición actualizada, febrero de 1999- Ed.
Universidad, pág. 500.

3) Confr. Hockl-Duarte, "Competencias y Atribuciones de la Corte Suprema de Justicia de la Nación", Ed. Legis,
capítulo VII, págs. 489/491.

4) Así se sostuvo que carece de fundamento legal el argumento del apelante referido a que el requerimiento de
acompañar copias del recurso de queja debió haber sido notificado por cédula a su parte, pues no contiene
intimación ni apercibimiento alguno de los contemplados por el art. 135 inc. 6º del CPCCN (Fallos: 323: 44).

5) Ver Fallos 316: 819 y sus citas.

6) Fallos: 311: 813 y 2021; 312: 1613; 315: 1919; 316: 63 y 624 y más recientemente en el RHE C.178 XXXIX
"Cristallini, Andrea Silvina c/ Serin S.A.", sentencia del 30 de septiembre de 2003.

7) Ver Fallos 320: 1677 y 326: 3348.

8) En el mismo sentido, pero en relación al depósito previo: Guisado, Héctor César en "El depósito previo en la
queja ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación" en Jurisprudencia 2003 III, págs. 746 y sig.

9) Fallos: 240: 9.

10) Fallos: 295: 658; 297: 558; 308: 249; 310: 2241; 317: 1447; 323: 308 y más recientemente S.1330 XXXIX
"Sierra, Fausto y otros c/ Administración General de Puertos Sociedad del Estado s/ diferencias salariales" del 6
de febrero de 2004 y RHE S.545 XXXIX "Solinz c/ Yankelevich", del.....

11) Colombo, Código Procesal, t. I, pág 458, citado por Néstor Pedro Sagüés en ob. Cit.

12) Para la certificación de fotocopias de actuaciones que se cumplieron ante la Corte, ver acordadas 29/95 y
50/95.

13) Metodología tomada de la obra "El recurso extraordinario" de Ymaz y Rey, Ed. Abeledo-Perrot, junio de
2000, págs.279 a 281.

14) Sagúes, Néstor Pedro, ob. cit. pág. 503.

15) En el mismo sentido sostuvo el Dr. Germán Bidart Campos que "...Si el recurso es denegado por el tribunal
de la causa, y el postulante recurre en queja ante la Corte, el carril reiterativo reproduce la misma cuestión por la
que el recurso fue denegado. Que la otra parte no vuelva a intervenir porque no se corra nuevo traslado, no
implica colocarla en situación de indefensión, desde que -según bien dice la Corte- ya dispuso de ocasión para
hacerse oír en la instancia extraordinaria cuando se le dio traslado de acuerdo al art. 257 del código procesal...",
E.D. t.144 pág 175 y siguientes: "No configura indefensión la falta de traslado en el Recurso de Queja ante la
Corte Suprema".

16) Fallos: 262: 34, 291: 80; 297: 543: 303: 241 y 685.

17) Fallos: 313: 1461 18) Fallos 325: 3380 (especialmente considerandos 2° y 3°).

19La Corte ha dicho que atribuir al listado del art. 13 de la ley 23.898 el carácter de una enumeración taxativa
que supuestamente esterilizaría las exenciones consagradas en otras leyes nacionales, viola el art. 1º del
precepto mencionado y desconoce su jurisprudencia.

20)Ver G.1077 XXXIX "Gómez, Julio Cesar c/ Vadra, Carlos Enrique y otros", sentencia del 24 de febrero de
2004 y R.518 XXXIX "Rodríguez, Aldo c/ Gazzanea, Ubaldino", sentencia del 9 de marzo de 2004 21)En Fallos:
323: 41, la Corte sostuvo que "si bien es aceptable la interposición válida de la queja sin el respectivo depósito
previo, a las resultas de la decisión que recaiga en el pedido del beneficio de litigar sin gastos, dicha solicitud
debe formularse antes del vencimiento del plazo para la presentación directa o contemporáneamente con su
interposición". Asimismo en Fallos: 313: 105 se destacó que "...corresponde no hacer lugar al recurso directo en
el que se omitió cumplir en término con el depósito previo, si no se ha demostrado la oportuna promoción del
trámite para obtener el beneficio de litigar sin gastos, no se ha alegado excención alguna...".

22)Fallos: 314: 292.

23) Confr. Fallos: 315: 2113; 320: 833; 323: 1095; 324: 548 y 326: 119 y lo resuelto en autos: "Venanzoni, Luis
Humberto c/ Estado Nacional -Ministerio de Defensa- Ejercito Argentino", del 19 de diciembre de 2000; F.228
XXXVII "Frazante, Carlos Francisco y otros s/ amparo", del 18 de diciembre de 2001; U.62 XXXVI "Unión del
Personal Civil de la Nación c/ Estado Nacional -Ministerio del Interior-", sentencia del 6 de marzo de 2001.O.179
XXXVI "Origlio, Vicente c/ Servicios Eléctricos del Gran Buenos Aires", sentencia del 20 de febrero de 2001;
C.394 XXXIII "Chiavanne, Juan Claudio (incidente de extensión de quiebra) c/ Graiver, Juan y otro", sentencia
del 16 de setiembre de 1997.

Potrebbero piacerti anche