Sei sulla pagina 1di 3

Una manera de entender la psicología

Hasta hace poco, y debido a ideas erróneas, o más que eso, limitadas; he creído que el
trabajo psicoanalítico no tiene carácter científico y que sus resultados no solo son
efímeros, sino que tal vez, hasta inconclusos o que directamente, no tenga resultados
positivos. Así mismo, y debido también a la influencia de diversos docentes durante mi
formación, creí que lo más importante para llegar a ser un profesional ejemplar eran las
aptitudes que uno podría tener más que las competencias que uno puede perfeccionar.
Sin embargo, con dificultad pero con gran esfuerzo y entendiendo el texto, puedo notar
que no hay peor error que la pre concepción de algo que no se ha analizado a profundidad,
o si quiera, con el rigor necesario. Es así que, puedo afirmar que los factores
indispensables e inherentes a un psicólogo, ciertamente son las aptitudes intelectuales y
las capacidades que éste pueda tener, pero más que eso, son la disciplina y la
organización. Disciplina entendida como el conjunto de actividades realizadas
rutinariamente en favor del crecimiento personal y profesional; y organización como el
manejo adecuado en el tiempo de estas actividades.
Además, se debe comprender que el trabajo supervisado por profesionales con mayor
experiencia, evidentemente traen consigo mejores resultados que el hecho de manera
individual y sin ningún tipo de corroboración. Este punto puede parecer algo obvio, pero
no es así para quienes por costumbre o reforzamiento social, están acostumbrados a
recibir más adulaciones que críticas. Por ello, puede ser algo complicado aperturar nuestra
percepción a puntos de vista como este.
En otra instancia, uno de los puntos que llama la atención sobre manera, es la definición
que el autor plantea como “tensión equilibrada”. Esto permite argumentar que a la persona
no se le suele presentar situaciones donde sea necesario poner todo el esfuerzo, ni
tampoco el de reconocer hasta qué punto llega sus fortalezas, es decir, existe un
desconocimiento de uno mismo. Pero qué, siendo consciente de la situación, y con mucha
convicción para ello, es posible un reconocimiento de los límites propios y por ende,
existir un mejoramiento en los resultados de la formación personal y profesional.
En conclusión, el trabajo psicológico va más allá de la sola formación académica. Puede
hasta considerarse una manera de vivir, una forma distinta de entender y afrontar la
realidad. La cual requiere capacidades intelectuales, conductas adecuadas,
responsabilidad para consigo y con los demás, organización y sobre todo, disciplina. El
psicólogo, ciertamente, no es más que un simple ser humano, pero es un ser humano que
tiene control de sí mismo.
El trabajo psicoanalítico suele ser uno de los más extenuantes y admirables dentro la
psicología. Esto se debe al gran esfuerzo, paciencia, organización y disciplina que
requiere. Sin embargo, y debido a las múltiples escuelas y grupos existentes, suele
atribuírsele poco carácter científico y objetividad, lo cual, a continuación se intentará
desmentir.
Para el autor, el psicoanálisis cuenta con dos defensas que le permiten afrontar tanto los
riesgos del trabajo como las actividades de contratransferencia, y estas son: El análisis
didáctico y el método analítico respectivamente. Sin embargo, hace mención que estas
defensas no serían completamente útiles si el trabajo se realiza de manera individualista,
sin tener en cuenta y/o contar con el contacto con otros analistas, sociedades científicas,
entre otros. Por esta razón, el futuro del psicoanálisis no recae en una sola persona y su
trabajo individual, sino más bien, será el trabajo conjunto el cual logrará mejores
resultados.
Además, menciona que el trabajo psicoanalítico, más que el dominio de la teoría y la
capacidad del psicoanalista, es un trabajo “artístico y atlético”, debido a que su mayor
fortaleza se encuentra en la “condición”. Y ésta depende de diversos esquemas que le
permiten mantenerse, sobre todo, las actividades que se realizan con un orden y esmero
preciso. Así mismo, estas actividades pueden requerir de una modificación, ya sea por
una necesidad planteada por el mismo analista, o por situaciones externas que obligan a
cambiarlas; ante todo esto, el analista debe estar preparado para poder afrontarlas.
Por otro lado, el analista debe apuntar a una estabilidad, pero ésta, debe estar relacionada
con lo que el autor denomina “tensión equilibrada”, es decir, realizar el mayor esfuerzo
posible teniendo en cuenta y conociendo la fortaleza misma del analista. Así mismo,
argumenta que solo gracias a este esfuerzo es posible llegar a obtener la “creatividad”, la
cual lo posiciona dentro del ámbito científico. Por esta razón, en el trabajo analítico, se
suele imponer ciertas regularidades que van a permitir una organización y el logro de los
objetivos de manera adecuada y perdurable. Es decir, la programación de sus pacientes
suelen ser a la misma hora y los días planificados con anterioridad, si estos no se llegaran
a cumplir por motivos de que al paciente no les posible acudir a cita, y sobre todo, que
recién se esté iniciando el trabajo analítico; esto va a ser un obstáculo que no va a permitir
“la profundización de la trasferencia”.
Débase tener en cuenta, según menciona el autor, que el paso crucial para el logro de los
objetivos del trabajo analítico, es el “paso del umbral a la posición depresiva a niveles
infantiles de la personalidad”. Así mismo, este suele ser uno de los trabajos más
complicados al que se enfrente el psicoanalista; es así que, la organización y la disciplina
juegan un rol esencial. Sin embargo, de no llegarse a pasar la etapa antes mencionada,
argumenta que “los logros no serán perdurables” y que el paciente puede recaer.
Contrariamente a lo que se pueda pensar, esto le puede ocurrir a la mayoría de analistas
y no significa un fracaso, ya que la “vitalidad y concentración” necesarias para este
trabajo, suelen ser inherentes a genialidades.
En síntesis, más que las aptitudes intelectuales que pueda poseer un psicoanalista, el punto
primordial y que hará la diferencia, es la organización, el manejo de los tiempos y el
esfuerzo que pueda éste aportar a su trabajo. Así como también, el acompañamiento, la
supervisión que acepte de parte de círculos científicos abocados al área.
 El análisis didáctico es el baluarte de la autodefensa del psicoanálisis ante los riesgos del
trabajo analítico cuando se lo prosigue de forma sistemática como un autoanálisis.
 El método analítico, es la mejor defensa ante las actividades contratransferenciales.
 Estos dos esquemas, no podrían continuar funcionando efectivamente para el análisis si no se
cuenta con sociedades científicas, el contacto con otros analistas, reuniones, supervisiones y
congresos.
 El análisis del futuro no se dará mediante trabajos individuales, sino más bien, será la tarea de
un grupo.
 La práctica del psicoanálisis es una combinación de actividad artística y atlética.
 Toma como tema central, la “condición” y como mantenerse en la misma.
 La “condición” del psicoanalista, depende de un esquema de actividades diarias, semanales,
periódicas y anuales, que son entendidas como un apoyo directo a su desempeño analítico.
 Áreas que requieren modulación: número de horas de trabajo, cantidad de dinero que gana,
distribución de los pacientes (tipos, grados de enfermedad), tiempo de descanso entre
pacientes, tiempo para tomar anotaciones (leerlas antes y después de los pacientes), tiempo
dedicado a lecturas, escribir trabajos, dar conferencias, enseñanzas y vacaciones.
 El analista debe mantener y encontrar un óptimo para cada rubro antes mencionado, debiendo
estar preparado para modificarlo si es necesario y resistir estas modificaciones si son dadas por
exigencias externas.
 El objetivo debe ser la estabilidad, y el secreto debe ser la simplicidad (el principio guía sugiero
sea una tensión equilibrada y cercana al límite).
 Debe realizarse con gran esfuerzo hasta donde lo permita la fortaleza del analista.
 Menciona que solo dentro de un marco de trabajo con tensión equilibrada surge la creatividad
del psicoanalista que lo vuelve científico.
 Existe un problema social ya que no es tarea fácil preservar la individualidad científica y evitar
el aislamiento, debido a la existencia de varias escuelas y grupos.
 Se puede comparar la actividad psicoanalítica con la de un atleta, debido a la confianza que
ambos tienen en el inconsciente observado desde el órgano de la consciencia.
 El psicoanálisis tiende a imponer ciertas regularidades: mantener horarios en orden (al mismo
paciente a la misma hora) y dejar las actividades profesionales para la noche.
 La calidad del trabajo se ve afectada adversamente cuando un paciente cancela su hora, aun
cuando lo haga con anticipación, dejando un hueco en el trabajo del día. Quiebra la marcha del
trabajo.
 Los días libres pueden impedir la profundización de la transferencia en el trabajo analítico. Por
lo tanto, la planificación es fundamental para la marcha y la condición del trabajo.
 El pasó crucial para generar la estabilidad de la estructura de la personalidad, es pasar al
paciente por el denominado umbral, a la posición depresiva a niveles infantiles de la
personalidad. Así mismo, la superación de la identificación proyectiva masiva es crucial para el
establecimiento de la salud mental, libre de psicosis.
 El tiempo y la repetición por sí solas, no llevarán a cabo esta tarea. Este periodo puede durar
por lo general 2 años y suele representarse en los sueños de los pacientes.
 Por lo cual, el desempeño excelente en éste ámbito, es clave para lograr pasar esta difícil fase
del trabajo. Así mismo, si no se alcanza este desempeño, los logros no serán perdurables. Los
pacientes que no han alcanzado la posición depresiva, recaerán.
 Qué pasará si no se llega a esta etapa? Habrá un fracaso en el desarrollo! Y esto le ocurrirá
eventualmente a casi todo analista, ya que la vitalidad y concentración requerida solo se da en
los genios como Freud.
 Sin embargo, no es perjudicial que los analistas cansados retrocedan a posiciones más
conservadoras. A pesar de ello, si se retrocede por negligencia o rechazo ante las exigencias de
la tarea, pueden convertirse en críticos destructivos y no en aportadores para el progreso.

Potrebbero piacerti anche