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FRATERNIDAD DE AGRUPACIONES SANTO TOMÁS DE AQUINO 1

DIRECCIÓN DE FORMACIÓN
Delegación de Formación Doctrinal para la Organización Mayor

Número 1 Setiembre 1998

LAS VIRTUDES Y LOS VICIOS SOCIALES

Comenzaremos por recordar lo que ya sabemos. La virtud es un hábito operativo que


santo Tomás define como "buena cualidad de la mente, por la que se vive rectamente y de
la cual nadie puede servirse para el mal". Lo contrario de la virtud es el vicio.

¿Qué significa "una buena cualidad de la mente"?


¿Esas cualidades son naturales, son adquiridas o pueden ser ambas cosas?
¿Por qué no pueden ser aplicadas al mal?

Las virtudes pueden ser:


Teologales o sobrenaturales
(Fe, esperanza y caridad). Son hábitos infusos por Dios a las facultades humanas.

Cardinales
(Prudencia, justicia, fortaleza y templanza) De acuerdo con la doctrina común podemos
considerarlas también infusas por Dios pero que se elevan y perfeccionan con el esfuerzo
humano
.
Naturales.
Entre ellas están las intelectuales y morales, que se adquieren por la repetición
constante de actos buenos.

Entre éstas se encuentran las sociales, que son aquellas que perfeccionan la vida del
hombre en la comunidad. El hombre, por naturaleza, necesita vivir en comunidad y estas
virtudes encauzan el apetito comunitario.

Estas virtudes están subordinadas y, por consiguiente, ligadas en relación de dependencia


con otras mayores. En general, aunque no exclusivamente, las virtudes sociales están
fuertemente ligadas a la caridad.

¿Dentro de qué grupo de virtudes se encuentran las sociales?


¿Qué entendemos por comunidad?

Puesto que las sociales están ligadas, entre otras virtudes mayores, especialmente a la
caridad por la que son iluminadas y de la que por consiguiente dependen, resulta
conveniente hacer un brevísimo repaso sobre esta virtud teologal.

La palabra caridad deriva del latín carus (caro, querido, amado) y significa amor. Pero
entre nosotros este vocablo es equívoco por demasiado abarcador. En griego existían cuatro
palabras que distinguían lo que nosotros englobamos en una:
éroos: amor erótico,
storguée: amor por lazos de sangre o por afinidad, incluye el amor familiar y el patriótico,
filía: amor de amistad,
agapée: amor religioso, el amor de Dios a nosotros y de nosotros a Dios y al prójimo por
amor a Dios.

En todos los casos supone una entrega, una renuncia al beneficio propio en favor del
bien del otro.

Leamos Tobías 4, 15 y Mateo 7,12 o Lucas 6, 31. y luego preguntémonos:

¿Hay alguna diferencia entre la admonición que aparece en Tobias y la de los


evangelistas?

¿Practicamos la "regla de oro" en nuestro trato con los demás en general y en nuestra
comunidad en particular?
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Virtudes sociales

Consideremos algunas de las virtudes sociales y meditemos sobre ellas y acerca de hasta
qué punto las practicamos.

Afabilidad
Afabilidad designa la calidad de afable. Afable quiere decir amable, cariñoso, suave en
la conversación. Etimológicamente deriva de "fablar", hablar. Cuando no hay afabilidad en
las palabras tampoco la hay en las ideas, ni en el tono, ni en la intención; por eso, lo que
tendría que ser un diálogo se convierte en un reclamo. La falta de afabilidad pone en
peligro la convivencia comunitaria y atenta contra la caridad.

¿Nos esforzamos por ser afables y lograr un verdadero diálogo tratando de que la
afabilidad se convierta en nosotros en un hábito espontáneo o en incrementarla si ya la
practicamos?

Agradecimiento
Es la acción y el efecto de agradecer. Agradecer es, primero, sentir gratitud, después,
también, demostrarla, dar gracias, mostrar de palabra y de hecho la gratitud. Incluye el
saber pedir perdón o disculpas por las ofensas o los perjuicios causados a los otros. Si no
sabemos agradecer ni disculparnos, no contribuimos, ciertamente, a la consolidación de la
comunidad y mostramos una carencia seria en lo que respecta a la caridad.

¿Sabemos agradecer con sinceridad y espontaneidad?

¿Sabemos pedir perdón por nuestros errores reconociéndolos sinceramente?

Alegría
Es un sentimiento que proviene generalmente de una grata satisfacción del alma y se
manifiesta, muchas veces, con signos exteriores. Es también la condición que inspira este
sentimiento de placer. Es una gran virtud cristiana: la primera palabra del ángel a María fue
"alégrate". La verdadera alegría no es una simple expresión externa bullanguera, surge de
lo interior y mueve a comunicarla, compartirla con los demás. Esta virtud está más ligada a
la esperanza; pero también lo está a la caridad, por la misma razón de ser comunicativa, de
su exigencia de ser puesta en común. Además, al comunicarla no sólo la transmitimos,
también incrementamos la propia.

¿Vivimos con alegría nuestra condición de cristianos aunque nos persigan y calumnien
por serlo?

¿Sabemos transmitir nuestra alegría a los otros y, sobre todo, alegrarnos con la alegría
ajena?

Amistad
Es el afecto recíproco entre dos o más personas, fundado en el amor al prójimo y,
generalmente, fortalecido por el trato frecuente. El amor de amistad es imprescindible para
que exista una comunidad. Pero hay que evitar el riesgo de que se convierta en excluyente,
que justifiquemos, fundados en el amor a nuestros amigos, el odio, el desprecio o la
indiferencia hacia los demás. Sería un vicio, una forma de egoísmo en la que el "yo" se
sustituiría por el "nosotros".

¿Sentimos verdadero afecto hacia todos los miembros de la comunidad, aun cuando
tengamos discrepancias con alguno o algunos de ellos?

¿Somos capaces de renunciar a alguna conveniencia para permitir que logre un bien un
amigo, varios amigos o la comunidad entera?

Cortesía
Es la demostración o acto con que se manifiesta la atención, el respeto o el afecto que
una persona tiene hacia otra. No se trata de una simple formalidad protocolar que simule
sentir lo que no se siente; para ser válida debe ser auténtica y surgir espontáneamente. No
es la interesada "cortesía del vendedor"; para ser verdadera debe surgir espontáneamente de
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la atención que concedemos y ésta del afecto y el respeto que sentimos. Si es fingida no es
cortesía, es hipocresía.

¿Practicamos espontáneamente la cortesía como resultado del afecto y el respeto que


sentimos por los otros?

¿Cómo consideramos la cortesía, como debilidad o como fortaleza?

Simpatía
Esta palabra proviene del latín Sympathia y éste del griego(simpátheia). Literalmente
podríamos traducirlo como sentimiento comunitario, sentir conjuntamente.
Etimológicamente es equivalente de compasión. Es la conformidad, inclinación o analogía
respecto de los afectos o sentimientos de otro. No se trata de lo que comúnmente se dice
"hacerse el simpático" o "caer simpático". Más que a los efectos que causamos en otros se
refiere a lo que nosotros sentimos por ellos. Aquí también es imprescindible la autenticidad,
no la mera formalidad protocolar.

¿Compartimos íntimamente los sentimientos y los afectos de los otros?

¿Sentimos como propias las alegrías y las desdichas ajenas?

¿Además de sentirlas y compartirlas, lo demostramos?

Sin éstas (y otras) virtudes, es imposible consolidar una comunidad. Pero recordemos
que, para ser virtudes, deben llegar a ser hábitos que surjan natural y espontáneamente
del interior de cada uno. De ser forzadas o fingidas sería hipocresía la que, obviamente,
no tiende a construir sino a demoler una comunidad.

Vicios sociales

Consideremos ahora algunos de los tantos vicios sociales que contribuyen a la


destrucción de una comunidad.

Calumnia
Es una acusación falsa. Consiste en atribuir a otros, falsa y maliciosamente, palabras,
actos o intenciones deshonrosas. Es hablar mal, con falsedad, de alguno. No es necesario
insistir mucho en la gravedad de la calumnia y la falta de amor al prójimo y el deterioro
para la comunidad que ella significa. A veces podemos querer justificarla en un error de
información; pero también se calumnia por atribuir actos deshonrosos sin certeza. Además,
si difundimos pretendidos errores ajenos es porque nos gusta.

¿Nunca difundimos maliciosamente versiones sobre faltas ajenas sabiendo que no es


verdad, no sabiendo con certeza si lo es o, simplemente, porque sentimos satisfacción en
ello?

¿Si sentimos satisfacción en degradar a otros, es por falta de amor, porque así me siento
superior o por que les deseamos el mal?

Indiscreción
Es la falta de discreción y de prudencia, es decir: la falta de sensatez para formar juicios
y de tacto para hablar y obrar. La indiscreción implica manifestar errores ajenos ante
personas y en lugares inadecuados. La indiscreción, como los demás vicios que estamos
viendo, está generalmente motivada por la soberbia que nos incita a rebajar a los otros para,
por comparación, considerarnos mejores nosotros.

¿Si alguien cometió un error, lo divulgamos ante cualquiera y donde sea o nos limitamos a
exponerlo sólo donde y ante quien corresponde?

¿Sentimos satisfacción al divulgar errores ajenos y no nos alegramos si se me demuestra


que estoy en un error?

Maledicencia
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Es la acción y el efecto de maldecir, en su acepción de hablar con mordacidad en


perjuicio de otro, degradándolo. Es decir, agrega a los vicios anteriores la intención de herir
y ofender con acritud y malignidad.

¿Es posible que, sin percatarnos, hayamos caído en acciones de este tipo?

Sospecha

Es la aprensión o el recelo de algo que creemos desfavorable fundados en conjeturas o


indicios con visos o apariencia de realidad. Es también la desconfianza, la duda o el recelo
que tenemos de alguna persona. Es un vicio muy insidioso y solapado porque se nos
presenta como aparentemente justificado lo que en nuestra conciencia sabemos que no lo
está. Es verdaderamente demoníaco ya que por ella el demonio nos tienta produciéndonos
intranquilidad y desasosiego, predisponiéndonos contra el prójimo y conduciéndonos, así,
a la destrucción de la comunidad y a la negación de la caridad mediante una falsa
apariencia de justificación.

¿Tratamos de rechazar las sospechas, de buscar la certeza de lo que sólo sospecho o doy
por realidad comprobada lo que no se basa más que en conjeturas e indicios?

Estos vicios (y otros) lesionan gravemente a la comunidad. Es indudable que debemos


preocuparnos, prestarles mucha atención y tratar de vencerlos y despojarnos, mediante
la práctica de las virtudes, de ellos (que el que más, el que menos, de todo todos un poco
tenemos).

Leer para meditar y reflexionar Mateo 5, 21-26

Autoevaluación

Esta autoevaluación es completamente personal. Cada uno debe hacerla para sí mismo
sin necesidad de que nadie más se entere de su resultado.

Conteste por sí o por no las preguntas que se formulan relacionadas con los
pensamientos que originaron en usted las consideraciones y los cuestionarios anteriores.

1º) ¿Me examiné yo mismo interiormente para comprobar hasta que punto se me pueden
aplicar las consideraciones efectuadas y las respuestas a las preguntas?

2º) ¿Pensé qué bien le vendría a fulano o a mengano meditar un poco sobre esto
(especialmente en lo referente a los vicios?)

3º) ¿Pensé en mí y también en otros?

Si se respondió sí únicamente a la primera pregunta, ha hecho un buen trabajo.

Si se respondió no a la primera pregunta o hay más de un sí en sus respuestas debe


repetir el trabajo. No sirvió para nada.

Para reflexionar: 1 Pedro 3, 8-9.


En conclusión, tened todos un mismo sentimiento, sed compasivos, amaos como
hermanos, sed misericordiosos y humildes. No volváis mal por mal ni insulto por insulto;
por el contrario, bendecid, pues habéis sido llamados a heredar la bendición.

UN SANTO DOMINICO: S. ALBERTO MAGNO

Nació en Lauingen, en Suabia, alrededor de 1200. Murió en Colonia en 1280. Fue


beatificado por Gregorio XV en 1622 y canonizado por Pío XI el 16 de diciembre de 1931.

Estudió en universidades italianas y, tras vencer la oposición familiar y sus propias


dudas, ingresó en la Orden hacia 1223.
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Fue siempre un asiduo observador de la naturaleza y sus estudios principales versaron


sobre ciencias naturales, filosofía y teología.

Enseñó en diversas universidades, como Colonia, Ratisbona, Estrasburgo y París. En esta


última era escuchado por estudiantes provenientes de diversos países, entre los cuales se
encontraba Santo Tomás de Aquino.

Escribió numerosos libros. Pero no fue sólo maestro y escritor. Siempre se puso al
servicio de la comunidad. En Colonia no era visitado únicamente por los estudiantes; en
torno a él solía reunirse también el clero cuando debía zanjar algún tema en disputa.

Actuó repetidamente como mediador y pacificador buscando solucionar conflictos


bélicos y su sentencia arbitral de 1258 es célebre no sólo por su sentido de justicia sino
también por la reforma administrativa que establece para bien de los ciudadanos.

En 1254 fue nombrado Provincial de los Dominicos alemanes (alrededor de mil


religiosos distribuidos en unos cuarenta conventos) y en 1256,acompañando al Papa y junto
a san Buenaventura, defendió a las órdenes mendicantes contra los ataques de profesores de
la Universidad de París que negaban el derecho de sus miembros a enseñar.

En 1256 fue designado Obispo de Ratisbona, cargo que aceptó a pesar de sus dudas y la
consternación del Maestro General de la Orden. El estado espiritual y económico de la
Diócesis era desastroso. Corrigió errores y abusos y en dos años consiguió, mediante su
accionar y su ejemplo de vida austera, ordenar tanto lo espiritual como lo financiero.

Los que habían perdido sus privilegios lo combatieron tenazmente y, por la vestimenta
que usaba, lo apodaron "Scarpone" (zapato viejo). Los ataques y el saber que había
cumplido su misión, lo movieron a renunciar.

Fue enviado a Alemania como predicador de la Cruzada para Palestina. En 1267 se retiró
al bajo Rhin para consagrar iglesias y altares y conferir órdenes. Siguió, no obstante,
viajando para asistir al Concilio de Lyon y para defender, en París, la doctrina de su
discípulo Tomás de Aquino.

Reflexionemos sobre algunos de los aspectos más salientes de la vida de san Alberto.
1º. Dedicó íntegramente su vida al servicio de Dios y del prójimo.
2º. Logró una perfecta integración de fe y ciencia.
3º. Defendió con ahínco el bien común de la comunidad.
4º. Defendió, también con ahínco, la justicia y la verdad.
5º. Puso también al servicio del bien común la austeridad de sus costumbres.

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