Hasta lo último de la tierra Serie: El ministerio del Espíritu Santo Trimestre Julio-

septiembre 2019

Tema 12. Los dones del Espíritu:

Don de profecía
Unidad: Los dones del Espíritu Santo- Fe, sanidad y milagros

I. Base bíblica
1 Tesalonicenses 5:19-21
No apaguéis al Espíritu. 20 No menospreciéis las profecías. 21 Examinadlo todo; retened
lo bueno.

I. Texto de desarrollo
1ª Corintios 12:10
A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro,
diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas.

II. Introducción
Dios ha hablado a la humanidad de diferentes maneras, y en diferentes tiempos de la
historia (Hebreos 1:3). En el Edén, las comunicaciones de Dios con el hombre eran
expeditas y no había ninguna interferencia de pecado. En el tiempo patriarcal, al
parecer, pasaron algunas generaciones sin que los hombres hablaran con Dios,
observándose que sus comunicaciones eran esporádicas, hasta el tiempo de Enoc y Noé,
que fueron mucho más fluidas en ese avivamiento temporal.

Luego, en los dos mil años de trato con Israel, el Espíritu de Dios venía sobre los
profetas, para revelarles las cosas que habrían de venir, de esa manera se escribieron
17 libros proféticos. Hubo, en ese periodo de dos mil años, repuntes de avivamientos,
bajo la administración de Moisés, Josué, Samuel, David entre otros, hasta el Calvario. Ya
en el Nuevo Testamento y, a partir del Pentecostés, el Espíritu Santo descendió para
morar en los creyentes, convirtiendo, potencialmente, a cada uno de los nacidos de
nuevo en profetas, por cuanto el Espíritu Santo, puede hablar por ellos, cuando lo desee
y ellos lo permitan.

La iglesia de los principios tuvo repuntes de grandes manifestaciones del Espíritu Santo
en las diversas congregaciones locales, especialmente la de Corinto, donde surgió un
avivamiento paralelo de manifestaciones del Espíritu Santo, y una profusión asombrosa
de obras de la carne, esa es la razón por la cual el apóstol Pablo definió cada uno de los
dones espirituales de manera específica, en cuanto a su origen, que es absolutamente
por la gracia de Dios, y que los dones no son residentes en los creyentes, sino en el
Espíritu Santo, y cómo se habrían de operar con el orden respectivo, en caso de
manifestaciones profusas de los dones del Espíritu.

El don de profecía fue uno de los dones que Pablo animó a que los creyentes se
prestasen para su manifestación, afirmando que, sobre todos los dones, debían los
creyentes profetizar. Este don es un don de inspiración, donde se hace saber lo que está
aconteciendo, o por suceder, en medio de la congregación, en el ámbito cristiano o en el
mundo, como las intervenciones del profeta Agabo en la casa de Felipe, que habló
acerca de lo que le esperaba al apóstol Pablo, no solo hablando audiblemente, sino
actuando físicamente acerca de la manera que tratarían al apóstol Pablo en Jerusalén los
enemigos del Evangelio.

Por otro lado, en otra operación del don de profecía, Agabo informó a la iglesia, por el
Espíritu, que vendría una hambruna en Israel, por lo que, de inmediato, las autoridades
de las iglesias, dieron por hecho el acontecimiento que se avecinaba y empezaron a
1
San Salvador, jueves 19 de septiembre, 2019 Correo electrónico: asistente@nuevopactosv.org Predicador en SS: pastor Iván Álvarez
Nota: A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas son tomadas de la versión RV1960, y el autor de los comentarios es el Ap. Isauro Vielman.
 Hasta lo último de la tierra Serie: El ministerio del Espíritu Santo Trimestre Julio-
septiembre 2019

recoger ofrendas y provisiones para los pobres de Jerusalén, a fin de darles soporte para
el evento.

Debemos definir que los dones del Espíritu son armas de luz, que alumbran, redarguyen
y reprenden las obras infructuosas de la carne y de los espíritus malignos que interfieren
en las reuniones donde se exalta el nombre del Señor.

Hechos 11:27-28
En aquellos días unos profetas descendieron de Jerusalén a Antioquía. 28 Y levantándose
uno de ellos, llamado Agabo, daba a entender por el Espíritu, que vendría una gran
hambre en toda la tierra habitada; la cual sucedió en tiempo de Claudio.

Romanos 12:6
De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de
profecía, úsese conforme a la medida de la fe.

1ª Timoteo 1:18
Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se
hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia, 19 manteniendo la fe y
buena conciencia, desechando la cual naufragaron en cuanto a la fe algunos.

A) Don de profecía
La profecía no es una herramienta particular ni mucho menos es un medio de torpes
ganancias, sino es una amorosa actitud del Espíritu Santo que, utilizando a un miembro
del cuerpo de Cristo, persigue animarlo, vendarle sus heridas y despejarle sus dudas.
Tampoco es una buena intención de un hermano, más bien es una poderosa manera de
Dios de levantar a los que están pasando por tiempos difíciles, y mostrándoles los
tiempos por venir.

1ª Corintios 14:3
Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación.

a) Edificación
La palabra oikodome en el griego significa edificación, que básicamente, es el acto de
construir una estructura, hablando de la edificación del cuerpo de Cristo como templo de
piedras vivas.

El don de profecía no es para dirigir o tomar decisiones a futuro, sino para construir en
las personas oyentes.

b) Exhortación

La palabra griega paraclasis, básicamente significa animar. Está íntimamente

relacionada con la palabra paracleto, el nombre que Jesús dio al Espíritu Santo. A
Bernabé le dieron en Jerusalem ese nombre, hijo de consolación o de ánimo.

También se deriva del término griego parakaleo (G3870): primariamente, llamar a una
persona (para, al lado; kaleo, llamar). Denota: a) llamar, rogar; b) amonestar, exhortar,
apremiar a alguien para que siga un curso de conducta; siempre en anticipación,
mirando al futuro, en contraste con el significado de consolar, que es retrospectivo, y
que tiene que ver con pruebas ya experimentadas. (Dicc. Vine)

Romanos 12:8
el que exhorta, en la exhortación; el que da, con liberalidad; el que dirige, con diligencia;
el que muestra misericordia, con alegría.

2
San Salvador, jueves 19 de septiembre, 2019 Correo electrónico: asistente@nuevopactosv.org Predicador en SS: pastor Iván Álvarez
Nota: A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas son tomadas de la versión RV1960, y el autor de los comentarios es el Ap. Isauro Vielman.
 Hasta lo último de la tierra Serie: El ministerio del Espíritu Santo Trimestre Julio-
septiembre 2019

1ª Corintios 14:31
Porque todos podéis profetizar uno por uno, para que todos aprendan y todos sean
exhortados.

c) Consolación

La palabra griega paramuthia significa calmar, confortar, traer consuelo.

Juan 11:19
Y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María, para consolarlas por su
hermano.

También del griego paraklesis que es equivalente a esperar la venida del Mesías.

Lucas 2:25
Y he aquí había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso,
esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él.

Consolador:
Del griego parakletos (G3875), lit. “llamado al lado de uno”, en ayuda de uno, es
principalmente un adjetivo verbal, y sugiere la capacidad o adaptabilidad para prestar
ayuda. Se usaba en las cortes de justicia para denotar a un asistente legal, un defensor,
un abogado; de ahí, generalmente, el que aboga por la causa de otro, un intercesor,
abogado, del Señor Jesús. En su sentido más amplio, significa uno que socorre, que
consuela. (Dicc. Vine)

Juan 14:16
Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para
siempre:

Mateo 5:4
Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación.

Conclusión
1ª Pedro 4:10-11
Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores
de la multiforme gracia de Dios. 11 Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si
alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado
por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén.

3
San Salvador, jueves 19 de septiembre, 2019 Correo electrónico: asistente@nuevopactosv.org Predicador en SS: pastor Iván Álvarez
Nota: A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas son tomadas de la versión RV1960, y el autor de los comentarios es el Ap. Isauro Vielman.