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UNIVERSIDAD ARTURO MICHELENA

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES

ESCUELA DE PSICOLOGÍA

ANSIEDAD Y DEPRESIÓN EN JÓVENES EMIGRANTES VENEZOLANOS,


CON EDADES COMPRENDIDAS ENTRE 18 A 25 AÑOS.

CASO DE ESTUDIO: “MUNICIPIO SAN DIEGO, UNIVERSIDAD ARTURO


MICHELENA”.

PROFESOR: INTEGRANTES:

JUAN REYES MARIA D´SILVA V-26.160.210

KEYLIN RODRIGUEZ V-25.985.916

MARIELBI BARRETO V- 26.330.538

ROSANA GARCÍA V- 26. 803.256

ALONDRA AGELVIS V- 26.960.409

SAN DIEGO, 17 DE FEBRERO DEL 2017


INTRODUCCIÓN

Durante los años '80 y '90 Venezuela dio un giro importante en sus
pautas migratorias. La severa crisis en la que se sumergió el país, no sólo
tuvo efectos desalentadores sobre los movimientos migratorios provenientes
del exterior, sino que, adicionalmente, contribuyó a desencadenar procesos
de retorno de los extranjeros que habitaban entre nosotros y la emigración de
venezolanos, quienes también accionaron frente a ese contexto de recesión
económica, descomposición social y deterioro institucional.

Sin embargo, es durante los últimos cinco años que, al parecer, esta
dinámica se acentúa, existiendo otros factores que también afectan está
situación; la escases de comida, la delincuencia… En su memoria
económica, social o política, la sociedad venezolana no tenía la vivencia de
la emigración, aquélla que implica el abandono del lugar de origen, por un
período de tiempo prolongado o indefinido.

Si bien en el curso de la década 2000 el país registra un nuevo período


de expansión económica, particularmente entre el 2003 y el 2008, ligada al
aumento sostenido del ingreso fiscal, gracias al alza de los precios del
petróleo, esta bonanza no ha implicado el impulso en inversiones en
infraestructuras públicas a los niveles experimentados en otras épocas, ni ha
motivado el ingreso de corrientes migratorias como en el pasado. Ese cambio
tampoco ha sido suficiente para reducir los riesgos de emigrar al exterior por
cuanto el clima de convivencia en el país se ha visto alterado por
la conflictividad política y los problemas relacionados con la falta de
seguridad en su sentido más amplio, tema que hace ruido a los ciudadanos.

Es por ello, que esta investigación tiene el propósito de examinar la


ansiedad y la depresión presentes en los jóvenes emigrantes venezolanos,
que ha servido de escenario para que se desencadene la emigración, en un
orden de magnitud no registrado antes y con un perfil altamente calificado.
No se trata simplemente de algunos indicios de cierto flujo de venezolanos
que salen al exterior, la información proveniente de los países que han
acogido a esos emigrantes ya revela que, por el contrario, esta corriente
migratoria está en franco crecimiento y asentamiento en esos lugares de
destino. Verificar la intensidad y características de la emigración venezolana
es una tarea difícil debido a las restricciones que existen en el país en cuanto
a las fuentes de información.

Sin embargo, el rastreo de las fuentes estadísticas internacionales, ha


permitido tener una idea del orden de magnitud del stock de venezolanos
emigrantes y de cuáles son los países que constituyen los principales
destinos de esta corriente migratoria. A diferencia de otros casos la
emigración venezolana no ha provocado reacciones en los lugares de
destino y en nuestro seno el tema sólo ha sido tratado en algunos reportajes
en los medios de comunicación y en artículos publicados en revistas
científicas. Se trata de una corriente migratoria compuesta por una
proporción importante tanto de profesionales universitarios como los que no
culminan sus estudios superiores por la transgresión que se le ha hecho a la
cultura venezolana.

No obstante, los profesionales que logran terminar sus estudios hasta


con títulos de postgrados, se llevan todo el conocimiento hacia otros países
dejando así a Venezuela sin jóvenes profesionales, de modo que se trata de
una transferencia de riqueza desde nuestro país. Además, abarcaremos
puntos que son la consecuencia de este fenómeno, como es la ansiedad y la
depresión.

Es así, como lo explicaremos de forma detallada en una estructura de


capítulos, donde el Capítulo I, de forma muy objetiva se expondrá el
planteamiento del problema, las interrogantes que aquejan esta
investigación, los objetivos de la investigación, que se desglosaran en el
objetivo general y objetivos específicos, junto con la justificación y la
delimitación que tiene esta investigación.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

EL PROBLEMA

(Bergman, 2003; Dumbar, 2003; Silk, Alberts y Altmann, 2003)


“Algunas conductas desempeñan una función evidente en la evolución. Por
ejemplo, la capacidad de encontrar comida, de esquivar los depredadores o
de defender a las propias crías, obviamente aumenta la capacidad del animal
para transmitir sus genes a generaciones posteriores. Otras conductas
desempeñan una función menos evidente, pero no menos importante”, es
por ello, que desde el comienzo de la historia, el ser humano ha tenido la
capacidad de adaptarse en el medio sea cual sea este. Sin embargo, cuando
ya no cumple con sus necesidades busca deshacerse de ese entorno y se
emprende a buscar otro.

En suma a esto, K. Rodriguez y M. D’silva (comunicación personal, 12


de febrero, 2017) refieren que “el individuo está en un constante cambio y de
forma muy dinámica se involucra con el medio para buscar suplir sus
necesidades. El ser humano es un ser biopsicosocial que se permite
adaptarse en un medio que le permita cumplir sus deseos, ya sea desde lo
más básico hasta lo más complejo”. Las necesidades del individuo son muy
importantes, como lo explica muy bien el teórico Abraham Maslow,
un psicólogo humanista, que afirma que nuestras acciones nacen de la
motivación dirigida hacia el objetivo de cubrir ciertas necesidades, las cuales
pueden ser ordenadas según la importancia que tienen para nuestro
bienestar.

Maslow, propuso una teoría sobre la motivación humana (en inglés, A


Theory of Human Motivation) en 1943, que posteriormente amplió. Donde
formula en su teoría una jerarquía de necesidades humanas y defiende que
conforme se satisfacen las necesidades más básicas (parte inferior de la
pirámide), los seres humanos desarrollan necesidades y deseos más
elevados (parte superior de la pirámide), estas se conforman de la siguiente
manera: fisiológicas, de seguridad, de afiliación, de reconocimiento y
autorrealización.

Como se mencionó anteriormente, todas estas necesidades surgen


para conseguir la autorrealización del individuo. Ahora bien, ¿qué ocurre
si estas necesidades no son cubiertas? Se evidencia que el individuo se
estanca y no superan los escalones de la pirámide, dejando atrás sus
deseos de superación ya sea por cualquier factor ambiental.

A consecuencia de esto, el individuo manifiesta síntomas negativos


que pueden ir desde la ansiedad hasta la depresión, entendiendo por
ansiedad que es una sintomatología mental caracterizada por una inquietud,
que puede ser sana porque nos ayuda a enfrentarnos ante una amenaza
real, pero que se puede volver dañina si persiste y por depresión que es un
trastorno del estado de ánimo, transitorio o permanente, caracterizado por
sentimientos de abatimiento, infelicidad y culpabilidad, además de provocar
una incapacidad total o parcial para disfrutar de las cosas y de los
acontecimientos de la vida cotidiana; ahora bien, ambas están
estrechamente relacionadas y es por ello que las mencionamos. Ya que es
pertinente ante esta problemática.

En Venezuela, se ha observado un fenómeno que se ha remontado


desde hace unos años dejando cifras alarmantes de jóvenes (muchos de
ellos universitarios) que no logran terminar sus estudios abandonando su
país de origen para buscar oportunidades, viendo sus pasos cada vez
más lejos de la meta por la situación país que vive Venezuela. En el 2001
la cifra de inmigrantes alcanzó 1.007.400 personas, lo que representa el
3,5% de la población, que según el Instituto Nacional de Estadística es de
28.946.101.

Por consiguiente, tenemos que muchos de los factores que influyen


la emigración de los venezolanos, los que se consideran más influyentes,
son la delincuencia, la escases de comida, la falta de medicamentos e
insumos de higiene personal y de otros rubros importantes para la
sociedad. Además, la economía ha fracturado en demasía la
supervivencia del país y de los habitantes del mismo.
Desde entonces, el alto costo de vivir en Venezuela, un país con
una riqueza petrolífera y minera, de abundante agricultura, ahora se
desvanece por la mala administración gubernamental y el uso indebido de
los recursos. Es sin duda alguna lo que hoy ha dado puerta abierta para
la emigración de muchos jóvenes, que cada vez son más. Dejando atrás
su zona de confort, su cultura y sus tradiciones, familiares y amigos;
muchos de ellos hacen un cambio brusco de planes para poder surgir en
otros horizontes.

(Latinos Globales, 2008; Mateo y Ledezma, 2006; Ibarra y Rodríguez,


2010) “Es por ello que, emigrar es algo más que la búsqueda de
oportunidades económicas, de un trabajo, es también la búsqueda de un
contexto seguro que permita el desarrollo de la simple vida cotidiana. La
emigración de venezolanos ha venido creciendo particularmente en los
estratos medios de la población y entre las razones más frecuentes para
dejar el país se han identificado: el hecho de no visualizar oportunidades de
desarrollo individual y la inseguridad personal”.

Aunque, el irse no garantiza el éxito, sino que es todo lo contrario,


pues se ven en la obligación de comenzar de cero, trayendo consigo el
desprendimiento familiar, de lo conocido y estable para el individuo.
También en mucho de los casos se experimenta síntomas de ansiedad y
depresión aun antes de irse; el solo hecho de vivir y luchar para suplir las
demandas básicas que no encuentran en su país de origen, sumado a
esto los altos costos de la vida del estudiante hacen que pensar en esta
decisión desencadene estos dos síntomas.

Los jóvenes son muy propensos a este tipo de trastorno ya que


tienden a ser más susceptibles a los factores que los rodean, porque son
muchísimos los que influyen en la detonación de estos trastornos. La
emigración puede acarrear muchísimos factores que influyan tanto en la
depresión como en la ansiedad de los venezolanos.

Mientras tanto, en el Estado Carabobo, el cual representa el 0,5% del


territorio nacional, se registró en el 2011 una cifra de 2.245.744 habitantes,
los cuales arrojan que en los últimos años se han ido del país casi el 2% de
los ciudadanos. Lo que destaca la grave problemática que no solo se ve de
forma general en Venezuela, también se observa en los pequeños estados,
como lo es Carabobo que no escapa de esta grave situación. Aunque no se
han hecho censos que demuestren la ansiedad y depresión que pueden
padecer los jóvenes emigrantes en el estado Carabobo se evidencia de igual
forma la ausencia de los mismos a través del censo nacional. Por lo que se
cree importante investigar estos síntomas en el municipio San Diego del
Estado Carabobo, dirigiéndonos principalmente a la Universidad Arturo
Michelena, fuente de muchas emigraciones por parte de sus estudiantes.
Es por ello que nos surge la siguiente interrogante:

¿Cómo medir los niveles de depresión y ansiedad en jóvenes


emigrantes venezolanos con edades comprendidas entre 18 a 25 años, en la
Universidad Arturo Michelena?
OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN

OBJETIVO GENERAL

Establecer la relación entre ansiedad y depresión en jóvenes


emigrantes venezolanos con edades comprendidas entre 18 a 25 años en la
Universidad Arturo Michelena.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

 Diagnosticar la sintomatología de la ansiedad y depresión en jóvenes


venezolanos con edades comprendidas entre 18 y 25 años de la
Universidad Arturo Michelena.
 Medir los niveles de ansiedad y depresión presentes en jóvenes
venezolanos con edades comprendidas entre 18 y 25 años de la
Universidad Arturo Michelena.

 Comparar la relación existente entre los resultados obtenidos de


ambas variables y así vincularla con el fenómeno de la emigración en
los jóvenes venezolanos con edades comprendidas entre 18 y 25
años de la Universidad Arturo Michelena.
JUSTIFICACIÓN

La decisión de muchos jóvenes venezolanos actualmente está


acarreando consigo diversos problemas como lo son la ansiedad y la
depresión. Lo que se quiere es determinar cuáles son los factores que más
se acerquen a la detonación de estos trastornos, porque la influencia de ellos
puede traer muchas consecuencias. Muchas son las causas por las cuales
los jóvenes venezolanos están tomando la decisión de irse del país pero,
¿por qué después de tomar esa decisión empiezan estos problemas
psicológicos?

Se evidencia que, los jóvenes al tomar tal decisión, -en la búsqueda


de una mejor oportunidad de vida- al hacerlo, las emociones juegan un papel
fundamental en el estado de ánimo y en las posibles complicaciones de
salud psicológica de estos individuos al verse envueltos en otro lugar, lejos
de su zona de confort con todos los obstáculos que se les puede presentar
en el camino y la energía que se invierte en esa nueva vida. No a todos los
jóvenes les va de la misma manera en otro país pero la intención es ¿cómo
ellos afrontan esa nueva situación? Y ¿Cómo salen adelante y llevan su
salud mental?
Muchos son los factores a la hora de tomar esta difícil decisión, la
situación actual del país ha generado que muchísimos venezolanos se vean
influenciados por una mejor oportunidad lejos de sus raíces. Los jóvenes
como se ha dicho en anterioridad son más susceptibles a sufrir de depresión
y ansiedad. Pero ¿cuál de estas dos variables es la que se dan con mayor
frecuencia? En San Diego, en la Universidad Arturo Michelena, estado
Carabobo hay una alta población de jóvenes que se han ido del país o están
pensando en la posibilidad, por diversas razones. Lo que se quiere con esta
investigación es identificar cuál de estas dos variables ha estado presente en
esa nueva vida y cuál ha sido el mayor detonante de la situación.

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