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BOLILLA 23. LOS INSTRUMENTOS PRIVADOS.

1.
INSTRUMENTO Y DOCUMENTO.

Documento es toda cosa que sea producto de un acto humano, perceptible con los
sentidos de la vista y el tacto, que sirve de prueba histórica indirecta y representativa de
un hecho cualquiera.

Entre documento a instrumento existe una relación de genero a especie, en razón de la


cual, el segundo, por ser exclusivamente escrito, abarca un ámbito mas restringido.

Hoy el papel ya no es el único soporte valido de los instrumentos privados, ni de los


particulares; ni la firma constituye un requisito ineludible, ni la escritura un único modo
de transmitir la voluntad.

Se está viviendo una etapa de desmaterialización del instrumento, es decir, que se esta
intentando otorgarle mayor importancia a la finalidad que el instrumento pretende
satisfacer.

CLASIFICACION DE LOS INSTRUMENTOS.

Artículo 286. Expresión escrita


La expresión escrita puede tener lugar por instrumentos públicos, o por instrumentos
particulares firmados o no firmados, excepto en los casos en que determinada
instrumentación sea impuesta. Puede hacerse constar en cualquier soporte, siempre que
su contenido sea representado con texto inteligible, aunque su lectura exija medios
técnicos.

El CCYC clasifica los instrumentos en públicos y particulares.

Lo que distingue al instrumento privado del publico es que para el privado no se


requiere la intervención de un oficial publico, pues las partes lo otorgan por si mismas.
De esta distinción se siguen diferencias en orden al valor probatorio.

EL PRINCIPIO DE LIBERTAD DE FORMAS.

En los privados y en los particulares rige el principio de libertad de formas.

Artículo 284. Libertad de formas


Si la ley no designa una forma determinada para la exteriorización de la voluntad, las
partes pueden utilizar la que estimen conveniente. Las partes pueden convenir una
forma más exigente que la impuesta por la ley.

No existen formas previstas para el instrumento privado, a no ser la exigencia de la


firma de las partes.
Las partes pueden firmar un instrumento cualquier día, se hábil o no y en cualquier
hora. No es necesario consignar el lugar y fecha de otorgamiento; ni el nombre y
domicilio de las partes; ni sus calidades personales. Las cantidades pueden ser escritas
en letras o en números. Pueden estar redactados en cualquier idioma, sobre cualquier
soporte y por cualquier persona en forma manuscrita, con lapicera, bolígrafo o lápiz,
mecanografiado o impreso.

Aunque no es necesario ninguno de estos elementos, el incluirlos constituye una buena


practica, desde que, de ser necesaria la prueba sobre la veracidad de lo allí sentado, la
mayor disponibilidad de datos facilitará la demostración.

Las reglas anteriores no son absolutas, así encontramos excepciones.

Artículo 2477. Requisitos


El testamento ológrafo debe ser íntegramente escrito con los caracteres propios del
idioma en que es otorgado, fechado y firmado por la mano misma del testador.

Artículo 316. Enmiendas


Las raspaduras, enmiendas o entrelíneas que afectan partes esenciales del acto
instrumentado deben ser salvadas con la firma de las partes. De no hacerse así, el juez
debe determinar en qué medida el defecto excluye o reduce la fuerza probatoria del
instrumento.

2.
EL SOPORTE DEL INSTRUMENTO.

Soporte es la cosa de cualquier material, sobre la cual está conformado el instrumento.

Existe la posibilidad de recurrir a medios tecnológicos, videocasete, disquete, cinta


magnética, etc.

La caracterización del instrumento no depende del soporte en el cual esté expuesto, sino
del contenido que se vuelque en ese soporte.

Tampoco el soporte guarda vinculación alguna con el acto instrumentado.

DISTINTOS TIPOS DE SOPORTES.

Pueden clasificarse en:

Informáticos:
- tarjeta perforada
- cinta de papel perforado
- disquete
- cinta magnética de computación

Ópticos:
- cinta de video
- microfilm

Auditivos:
- disco fonográfico
- cinta magnética de audio.

La expresión escrita puede constar en cualquier soporte.

LA ESCRITURA.

El CCYC no prohíbe la existencia de instrumentos que comuniquen ideas por un medio


distinto a la escritura ni prohíbe su utilización para acreditar la existencia de un
contrato.

Ver ART 1019, 1020.

TIEMPO HABIL PARA LA INSTRUMENTACION BAJO FORMA PRIVADA.

No existe ninguna referencia a la fecha en que deben ser confeccionados u otorgados los
instrumentos privados, por lo cual no hay limitaciones para ello.

3.
REQUISITOS DE VALIDEZ DEL INSTRUMENTO PRIVADO.

El principio de libertad de formas para los instrumentos privados tiene solo una
excepción: la exigencia de la firma.

LA FIRMA.

Artículo 288. Firma


La firma prueba la autoría de la declaración de voluntad expresada en el texto al cual
corresponde. Debe consistir en el nombre del firmante o en un signo.
En los instrumentos generados por medios electrónicos, el requisito de la firma de una
persona queda satisfecho si se utiliza una firma digital, que asegure indubitablemente la
autoría e integridad del instrumento.

Artículo 313. Firma de los instrumentos privados


Si alguno de los firmantes de un instrumento privado no sabe o no puede firmar, puede
dejarse constancia de la impresión digital o mediante la presencia de dos testigos que
deben suscribir también el instrumento.

Artículo 2476. Firma


Cuando en los testamentos se requiera la firma, debe escribírsela tal como el autor de
ella acostumbra firmar los instrumentos públicos o privados. Los errores de ortografía o
la omisión de letras no vician necesariamente la firma, quedando su validez librada a la
apreciación judicial.
Artículo 314. Reconocimiento de la firma
Todo aquel contra quien se presente un instrumento cuya firma se le atribuye debe
manifestar si ésta le pertenece. Los herederos pueden limitarse a manifestar que ignoran
si la firma es o no de su causante. La autenticidad de la firma puede probarse por
cualquier medio.
El reconocimiento de la firma importa el reconocimiento del cuerpo del instrumento
privado.
El instrumento privado reconocido, o declarado auténtico por sentencia, o cuya firma
está certificada por escribano, no puede ser impugnado por quienes lo hayan
reconocido, excepto por vicios en el acto del reconocimiento. La prueba resultante es
indivisible.
El documento signado con la impresión digital vale como principio de prueba por
escrito y puede ser impugnado en su contenido.

El instrumento privado con firma reconocida, o declarado autentico en proceso judicial


o cuya firma haya sido verificada por escribano publico no puede ser atacada de
invalidez, salvo que la causa de la objeción sea la existencia de vicios en el acto de
reconocimiento.

CARACTERES.

Ser olografa.

Debe ser escrita de puño y letra del firmante a quien se imputa.

No puede haber, por tanto, firmas impresas, sean facsimilares o transcripción de nombre
y apellido, ni copiadas, o calcadas, por terceros.

Manifestaciones de individualidad.

Debe ser expresión de la individualidad de quien la escribe.

Exclusiva.

Constituye una referencia a su individualidad.

Habitual.

La firma debe ser la forma habitual de expresar la voluntad.


Nada importa si es legible o no, si es que constituye la forma habitual de la firma.

Expresión de voluntad.

Debe ser puesta al pie del instrumento, a fin de demostrar su asentamiento con todo el
texto que le precede en papel.

Solo por excepción puede ser puesta al margen.

La cuestión del lugar en que debe firmarse.


Para evitar cuestiones sobre el contenido de un documento de varias paginas, es de
practica que se ponga la firma integra a su pie, y media firma en cada hoja anterior, o
que se mantenga la correlatividad de las mismas firmando en forma tal que los trazos
abarquen dos fojas, lo que se logra superponiendo las hojas de papel.

Deformación voluntaria de la propia firma.

La deformación, voluntaria o involuntaria de la propia firma, vale como firma.

FUNCION DE LA FIRMA.

Ha servido clásicamente para la obtención de dos objetivos: imputación de autoria del


acto y demostración de la voluntad de su autor.

El régimen del CCYC confirma ambas funciones.

LA FIRMA DIGITAL.

Se utiliza la expresión firma digital para individualizar los procedimientos o métodos


destinados a identificar al autor de un documento transmitido por medios electrónicos,
así como que esa persona aprueba su contenido.

El CCYC se ha inspirado en la ley modelo de UNCITRAL. Y lo define en la última


parte del 288.
“En los instrumentos generados por medios electrónicos, el requisito de la firma de una
persona queda satisfecho si se utiliza una firma digital, que asegure indubitablemente la
autoría e integridad del instrumento.”

El método que actualmente tiene mayor desarrollo es el de la criptografía de clave


pública o privada, que permite identificar al sujeto por la clave que pone en el
documento; al poner esa clave el documento queda encriptado y es inalterable.

LA LEY DE FIRMA DIGITAL.

La ley 25506 es la ley de firma digital.

ARTÍCULO 2º — Firma Digital. Se entiende por firma digital al resultado de


aplicar a un documento digital un procedimiento matemático que requiere
información de exclusivo conocimiento del firmante, encontrándose ésta bajo su
absoluto control. La firma digital debe ser susceptible de verificación por
terceras partes, tal que dicha verificación simultáneamente permita identificar
al firmante y detectar cualquier alteración del documento digital posterior a su
firma.

Los procedimientos de firma y verificación a ser utilizados para tales fines serán
los determinados por la Autoridad de Aplicación en consonancia con estándares
tecnológicos internacionales vigentes.

ARTÍCULO 5º — Firma electrónica. Se entiende por firma electrónica al


conjunto de datos electrónicos integrados, ligados o asociados de manera lógica
a otros datos electrónicos, utilizado por el signatario como su medio de
identificación, que carezca de alguno de los requisitos legales para ser
considerada firma digital. En caso de ser desconocida la firma electrónica
corresponde a quien la invoca acreditar su validez.

ARTICULO 6º — Documento digital. Se entiende por documento digital a la


representación digital de actos o hechos, con independencia del soporte
utilizado para su fijación, almacenamiento o archivo. Un documento digital
también satisface el requerimiento de escritura.

ARTICULO 3º — Del requerimiento de firma. Cuando la ley requiera una firma


manuscrita, esa exigencia también queda satisfecha por una firma digital. Este principio
es aplicable a los casos en que la ley establece la obligación de firmar o prescribe
consecuencias para su ausencia.

ARTICULO 6º — Documento digital. Se entiende por documento digital a la representación


digital de actos o hechos, con independencia del soporte utilizado para su fijación,
almacenamiento o archivo. Un documento digital también satisface el requerimiento de
escritura.

ARTICULO 4º — Exclusiones. Las disposiciones de esta ley no son aplicables:

a) A las disposiciones por causa de muerte;

b) A los actos jurídicos del derecho de familia;

c) A los actos personalísimos en general;

d) A los actos que deban ser instrumentados bajo exigencias o formalidades


incompatibles con la utilización de la firma digital, ya sea como consecuencia de
disposiciones legales o acuerdo de partes.

Si la expresión de voluntad debe exteriorizarse por una forma solemne y se hubiese


firmado digitalmente, el acto seria nulo por defecto de forma.

Si se tratase de actos formales no solemnes, el documento digital puede servir de prueba


de su celebración u otorgamiento, y autorizaría a reclamar la satisfacción de la forma
legalmente establecida.

Artículo 285. Forma impuesta


El acto que no se otorga en la forma exigida por la ley no queda concluido como tal
mientras no se haya otorgado el instrumento previsto, pero vale como acto en el que las
partes se han obligado a cumplir con la expresada formalidad, excepto que ella se exija
bajo sanción de nulidad.

Requisitos de eficacia de la firma digital.

 Que haya sido creada durante el periodo de vigencia del certificado digital
valido del firmante.
 Que sea debidamente verificada con la referencia de los datos de comprobación
de firma digital, indicados en dicho certificado, según el procedimiento que a
esos efectos corresponde.
 Que dicho certificado haya sido emitido o reconocido por un certificador
licenciado.
Originales.

ARTICULO 11. — Original. Los documentos electrónicos firmados digitalmente y los


reproducidos en formato digital firmados digitalmente a partir de originales de primera
generación en cualquier otro soporte, también serán considerados originales y poseen, como
consecuencia de ello, valor probatorio como tales, según los procedimientos que determine
la reglamentación.

Conservación de documentos.

ARTICULO 12. — Conservación. La exigencia legal de conservar documentos,


registros o datos, también queda satisfecha con la conservación de los
correspondientes documentos digitales firmados digitalmente, según los
procedimientos que determine la reglamentación, siempre que sean accesibles
para su posterior consulta y permitan determinar fehacientemente el origen,
destino, fecha y hora de su generación, envío y/o recepción.

El correo electrónico, e-mail o mail.

El correo electrónico es un documento digital tal como ha sido definido, y ello en


cuanto representa hechos o actos de forma digital independientemente de su soporte,
almacenamiento o archivo.

El valor probatorio del correo electrónico, si estuviera firmado digitalmente, seria el de


instrumento privado.

La jurisprudencia dominante les da el carácter de instrumento particular no firmado o


bien de principio de prueba por escrito en los términos del 286 y 1020.

El correo electrónico es también una especie del genero correspondencia, con lo cual los
requisitos y principios para utilización de la correspondencia en juicio como medio
probatorio son aplicables a esta especie.

Los intercambios epistolares de terceras personas ajenas al juicio donde se pretenden


utilizar no pueden ser aceptados, dado que ello violaría el principio constitucional de
inviolabilidad de la correspondencia.

LA IMPRESIÓN DIGITAL.

Artículo 313. Firma de los instrumentos privados


Si alguno de los firmantes de un instrumento privado no sabe o no puede firmar, puede
dejarse constancia de la impresión digital o mediante la presencia de dos testigos que
deben suscribir también el instrumento.

Artículo 314. Reconocimiento de la firma


Todo aquel contra quien se presente un instrumento cuya firma se le atribuye debe
manifestar si ésta le pertenece. Los herederos pueden limitarse a manifestar que ignoran
si la firma es o no de su causante. La autenticidad de la firma puede probarse por
cualquier medio.
El reconocimiento de la firma importa el reconocimiento del cuerpo del instrumento
privado.
El instrumento privado reconocido, o declarado auténtico por sentencia, o cuya firma
está certificada por escribano, no puede ser impugnado por quienes lo hayan
reconocido, excepto por vicios en el acto del reconocimiento. La prueba resultante es
indivisible.
El documento signado con la impresión digital vale como principio de prueba por
escrito y puede ser impugnado en su contenido.

LA FIRMA A RUEGO.

Artículo 313. Firma de los instrumentos privados


Si alguno de los firmantes de un instrumento privado no sabe o no puede firmar, puede
dejarse constancia de la impresión digital o mediante la presencia de dos testigos que
deben suscribir también el instrumento.

En ningún caso es valida la firma a ruego en aquellos supuestos de actos solemnes,


como es el testamento ológrafo.

VALIDEZ DE LOS INSTRUMENTOS SIN FIRMA.

Sobre la imputación de autoria.

Existen numerosas transacciones que son procesadas sin la firma del titular, y que
garantizan autoria.

Puede afirmarse que la maquina, el cajero automático, no puede leer la firma pero si
reconocer al titular de la tarjeta cuando se le ofrece la lectura de la banda magnética de
la misma, en combinación con el password o clave.

Regulación en el CCYC.

Artículo 319. Valor probatorio


El valor probatorio de los instrumentos particulares debe ser apreciado por el juez
ponderando, entre otras pautas, la congruencia entre lo sucedido y narrado, la precisión
y claridad técnica del texto, los usos y prácticas del tráfico, las relaciones precedentes y
la confiabilidad de los soportes utilizados y de los procedimientos técnicos que se
apliquen.

EL DOBLE EJEMPLAR.

En el CC, la exigencia del doble ejemplar era de orden publico, por lo que no podía ser
dejada sin efecto por convención de las partes.
El requisito podía cumplirse mediante copia carbónica, fotocopia o cualquier medio. La
firma debía ser autógrafa en cada original.
Si no se cumplía la regla del doble ejemplar el instrumento era nulo de nulidad relativa.

El CCYC no incluyo la formalidad del doble ejemplar en los instrumentos privados.


En la practica negocial es aconsejable a las partes que cada una requiera su ejemplar.

3.
REQUISITO DE OPONIBILIDAD.

FECHA CIERTA.

Es aquella que otorga certeza de que el instrumento privado ya estaba firmado al


momento de su producción, o no pudo ser firmado después de su acaecimiento.
En la fecha del instrumento pueden depender derechos de terceros, por lo que frente a
éstos no vale necesariamente la fecha que exhibe el documento sino la que la ley
considera como fecha cierta.

La ausencia de fecha cierta no obsta a la plena validez del instrumento privado, pero su
contenido no será oponible frente a terceros.

Artículo 317. Fecha cierta


La eficacia probatoria de los instrumentos privados reconocidos se extiende a los
terceros desde su fecha cierta. Adquieren fecha cierta el día en que acontece un hecho
del que resulta como consecuencia ineludible que el documento ya estaba firmado o no
pudo ser firmado después. La prueba puede producirse por cualquier medio, y debe ser
apreciada rigurosamente por el juez.

Los instrumentos privados que carecen de fecha cierta resultan inoponibles frente a
terceros.

MODO DE ADQUIRIR FECHA CIERTA.

Entre las partes y sucesores universales.

Entre las partes que firmaron el instrumento, la fecha cierta del documento depende del
reconocimiento que del mismo haga el firmante contra el que se lo invoca.

Si el instrumento no es reconocido no queda probada su existencia, ni su contenido, ni


su fecha.

Frente a los sucesores universales, los efectos dependen también del reconocimiento por
el firmante a quien se oponía, ya que el 314, no excepciona a tales sucesores de los
efectos del reconocimiento.

Fecha cierta respecto de terceros en el CCYC.

Artículo 317. Fecha cierta


La eficacia probatoria de los instrumentos privados reconocidos se extiende a los
terceros desde su fecha cierta. Adquieren fecha cierta el día en que acontece un hecho
del que resulta como consecuencia ineludible que el documento ya estaba firmado o no
pudo ser firmado después. La prueba puede producirse por cualquier medio, y debe ser
apreciada rigurosamente por el juez.

El documento adquiere fecha cierta el día en que murió una de las partes que lo firmo, o
el día en que se lo presento en un expediente judicial o administrativo.
La jurisprudencia admitió que la certificación notarial de las firmas o el pago del
impuesto de sellos también dan fecha cierta a los instrumentos privados.

INSTRUMENTOS PRIVADOS FIRMADOS EN BLANCO.

Por aplicación del principio de libertad de formas no está prohibido que primero se
firme un instrumento y luego se llene el texto. A esto ultimo se denomina firma en
blanco.

Es firmar un instrumento dejando claros que luego llenara otra persona.

No configura firma en blanco si el tenedor de un instrumento firmado por otro llena el


espacio vacío que media entre el texto y la firma.

Documento suscripto por un ciego.

La firma de un instrumento privado por un ciego, su suscripción es a ciegas, es decir, sin


que el firmante tenga la posibilidad de ver lo que firma.

Naturaleza jurídica del otorgamiento de firma en blanco.

Las relaciones entre el firmante y la persona a quien se entrega el instrumento para que
lo llene se rigen por las reglas del contrato de mandato, y que en dicho caso se daría la
celebración tacita de tal contrato.

En el caso de la firma en blanco solo se podría evitar el otorgamiento del acto


recuperando el instrumento.

Hasta cuando puede llenarse el instrumento.

Toda vez que la firma en blanco es considerada una suerte de mandato tácito, igual que
todo mandato se extingue con la muerte o incapacidad del mandatario o del mandante.
Con posterioridad a alguno de esos hechos, solo podría firmarse si el instrumento
hubiese sido entregado en el interés conjunto del mandante y mandatario, o de un
tercero.

Valor probatorio del instrumento firmado en blanco.

Para su eficacia lo único relevante es que la firma colocada al pie del instrumento sea
autentica, haya sido puesta antes o después del texto.

No es exigible en el derecho argentino, que el firmante además de reconocer su firma,


reconozca o admita el texto.

Impugnación por haberse llenado con abuso de confianza. Prueba.

Puede ocurrir que el tenedor del instrumento firmado en blanco lo llene con un
contenido diferente al previsto por el firmante.

Artículo 315. Documento firmado en blanco


El firmante de un documento en blanco puede impugnar su contenido mediante la
prueba de que no responde a sus instrucciones, pero no puede valerse para ello de
testigos si no existe principio de prueba por escrito.

El firmante defraudado en su confianza deberá demostrar dos hechos: que el


instrumento fue firmado en blanco; y que fue llenado por su tenedor con un contenido
distinto al indicado.

Ambas circunstancias pueden acreditarse por cualquier medio de prueba a excepción de


la testimonial, salvo que exista principio de prueba por escrito de la violación del
mandato.

Inoponibilidad de la impugnación frente a terceros de buena fe.

El desconocimiento del firmante no debe afectar a terceros de buena fe.

La buena fe se p resume incumbiendo la prueba de la mala fe a quien la invoque.

Sustracción del instrumento firmado en blanco de la persona que lo ha recibido.

Cuando el documento firmado en blanco es sustraído contra la voluntad de la persona


que lo guarda, esas circunstancias pueden probarse por cualquier medio. En tal caso, el
contenido del instrumento no puede oponerse al firmante excepto por los terceros que
acrediten su buena fe si han adquirido derechos a título oneroso en base al instrumento.

El signatario o quien pretenda dejar sin efecto el instrumento de que se trate, deberá
demostrar que el instrumento fue firmado en blanco, que fue sustraído del poder del
firmante o de la persona a la que se lo entregó, y que ésta lo lleno contra la voluntad del
signatario o del mandatario.

Los terceros de buena fe que adquirieron derechos a titulo oneroso por haber contratado
con el ladrón quedan protegidos frente a la impugnación del signatario y sus derechos
no son dejados sin efecto por la acción del perjudicado.

CORRESPONDENCIA.

Las correspondencias deben consistir en expresiones escritas entre dos o mas personas
de suerte que quedan excluidas las conversaciones telefónicas.

Tampoco están comprendidas en el concepto, las cartas abiertas y solicitadas.

Pueden no estar firmadas, o estar suscriptas por sobrenombres o referencias al vinculo


que tiene el remitente con el destinatario.

Lo importante no es la firma sino la autenticidad del texto.

No es exigible la firma. No sucede lo mismo con el requisito de oponibilidad o fecha


cierta que si es exigible.

Propiedad.
Artículo 318. Correspondencia
La correspondencia, cualquiera sea el medio empleado para crearla o transmitirla, puede
presentarse como prueba por el destinatario, pero la que es confidencial no puede ser
utilizada sin consentimiento del remitente. Los terceros no pueden valerse de la
correspondencia sin asentimiento del destinatario, y del remitente si es confidencial.

Las piezas de correspondencia, son cosas muebles.


En cuanto tal, pertenecen a quien la escribió hasta que llegue a poder del destinatario.
Cuando es puesta en poder del destinatario, la propiedad se transmite al nuevo poseedor
quien tendrá a su respecto la totalidad de las facultades que importa el derecho de
dominio.

Quien la redactó y remitió conserva el derecho intelectual sobre su contenido.


De allí que el dueño de la carta no pueda divulgarla indiscriminadamente, ni atribuirse
la autoria de las palabras o ideas allí expresadas.

Admisibilidad como medio de prueba.

Las piezas de correspondencia están autorizadas como medio de prueba.

El ser confidencial la correspondencia no depende de la calificación que le atribuya el


remitente, sino a la naturaleza de su contenido. En caso de duda, se presumen
confidenciales.

De allí que solo puedan esgrimirse en juicio piezas habidas legítimamente.


La obtención de piezas de correspondencia por medio de su interceptación o sustracción
esta incriminada.

Se ha admitido como excepción, que un cónyuge intercepte la correspondencia dirigida


al otro para su utilización como prueba.

Si la pieza fuera a ser utilizad contra el remitente, notamos que entre corresponsales no
hay secreto. El texto de una carta misiva puede ser esgrimida por el destinatario que la
tiene en su poder contra el remitente que la envió.
En este caso, el valor probatorio es amplio.

También el destinatario puede utilizar la pieza en un litigio con un tercero.

Si la pieza postal estuviera en poder de un tercero se deberá demostrar que éste la ha


obtenido por medios lícitos.
Para que el tercero pueda hacer valer la correspondencia, deberá demostrar el
consentimiento del destinatario.

En el supuesto en que el remitente pretendiera hacer valer una carta enviada a un


tercero, dicho remitente seria un tercero respecto de la pieza en cuestión y solo podría
utilizar dicha pieza con el consentimiento del destinatario.

Las cartas remitidas por terceros pueden ser utilizadas en juicio, en la medida que sean
esgrimidas por el destinatario, o por terceros con su consentimiento.
Las cartas con destino post mortem gozan de la garantía constitucional de inviolabilidad
de la correspondencia y los derechos del fallecido deben ser respetados en su máxima
expresión posible, evitando que las mismas devengan publicas.

5.
FUERZA PROBATORIA DE LOS INSTRUMENTOS PRIVADOS.

Artículo 319. Valor probatorio


El valor probatorio de los instrumentos particulares debe ser apreciado por el juez
ponderando, entre otras pautas, la congruencia entre lo sucedido y narrado, la precisión
y claridad técnica del texto, los usos y prácticas del tráfico, las relaciones precedentes y
la confiabilidad de los soportes utilizados y de los procedimientos técnicos que se
apliquen.

El juez tendrá amplitud de posibilidades para asignar valor al instrumento de acuerdo a


su entidad y a las circunstancias del caso.

EL RECONOCIMIENTO DE LA FIRMA.

Es necesario que la firma que lo suscribe sea reconocida como autentica por su presunto
autor.
Una vez que ello ocurra, la fuerza probatoria entre las partes, del instrumento privado,
es similar a la del instrumento publico. Para hacerlo oponible a terceros debe obtener
fecha cierta.

Formas de reconocimiento.

Cualquier medio de prueba es admisible para demostrar la titularidad de la firma.

A) Reconocimiento espontáneo.

Ocurre cuando el firmante manifiesta que la firma que suscribe el documento le


pertenece.

Artículo 314. Reconocimiento de la firma


Todo aquel contra quien se presente un instrumento cuya firma se le atribuye debe
manifestar si ésta le pertenece.

B) Reconocimiento provocado judicialmente.

Si la presentación del documento se realiza en juicio, entonces el reconocimiento deberá


tener lugar judicialmente.

La citación para reconocer firma se hace bajo el apercibimiento de que si el citado no


comparece sin justa causa se le tendrá por reconocida la firma.
De la citación judicial para que la persona a la que se atribuya la firma comparezca al
juzgado a reconocerla o desconocerla, pueden seguirse tres consecuencias:
 Reconocimiento expreso: el citado comparece al juzgado y reconoce como
autentica la firma que se le exhibe al pie del instrumento privado.
 Reconocimiento tácito: el citado no comparece, o lo hace y no se pronuncia en
forma categórica sobre si la firma es o no autentica. Juega entonces el
apercibimiento de las normas procesales y se otorga a ese silencio valor como
manifestación de voluntad, en cuya virtud se le da por reconocida la firma.
 Desconocimiento expreso.

C) Reconocimiento forzoso.

Es el que acontece cuando el citado judicialmente niega en forma expresa la


autenticidad de su firma, la que luego de ser sometida al peritaje y por sus conclusiones,
es declarada autentica por el juez.

Quienes pueden reconocer la firma.

Su autor: toda persona a quien se atribuya el carácter de autor de la firma puede


reconocer la firma.

Los sucesores del firmante: si bien los sucesores universales del firmante o autor
continúan su persona en lo atinente a sus derechos y obligaciones, pueden ignorar, si la
firma que se atribuye a su causante es autentica o no.

Respecto de la citación de los sucesores, la citación puede incluir el mismo


apercibimiento que la citación del autor.

EFECTOS ENTRE LAS PARTES.

El reconocimiento de la firma importa el reconocimiento del cuerpo del instrumento


privado.

El reconocimiento de la firma genera la presunción iuris tantum de que el contenido o


texto del instrumento es autentico. El firmante puede probar que el texto ha sido
adulterado o falseado.

La presunción iuris tantum de autenticidad que se sigue del reconocimiento de la firma


se extiende a la fecha del instrumento, salvo frente a terceros.

Tampoco el principio antes visto, será aplicable en materia de testamento ológrafo.

Eficacia del reconocimiento. Inimpugnabilidad.

El instrumento privado reconocido, o declarado auténtico por sentencia, o cuya firma


está certificada por escribano, no puede ser impugnado por quienes lo hayan
reconocido, excepto por vicios en el acto del reconocimiento. La prueba resultante es
indivisible.
Cuando la firma ha sido reconocida, o ha sido declarado autentica por sentencia, o
cuando la firma haya sido certificada por escribano no puede ser impugnada salvo que
se alegue la existencia de vicios de consentimiento en el acto que llevo a reconocer la
signatura.

EFECTOS ENTRE TERCEROS.

Para que el instrumento resulte oponible a terceros es requerible que también tenga
fecha cierta.

DESCONOCIMIENTO DE LA FIRMA.

La firma puede desconocerse a través de tres vías: el desconocimiento expreso de la


autenticidad de la firma hecho por la persona a la que se imputa su autoria, o por sus
sucesores; la manifestación de éstos en el sentido de que ignoran si la firma es de su
causante. Agregamos que la incapacidad de hecho del presunto autor hacer que la firma
no pueda ser reconocida, con lo que en dicho caso la firma queda sin verificar.

MEDIOS DE PRUEBA.

Todos los medios de prueba son admisibles para la verificación de la firma. El medio
que se impone en esta cuestión es la prueba pericial caligráfica.

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