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ESTUDIO BÍBLICO

LA ACCIÓN SOCIAL II
POR: PASTOR SANTOS ORANGEL SUÁREZ
INTRODUCCIÓN
Si estudiamos con atención la vida de nuestro Señor Jesús y su ministerio en la tierra, podremos
darnos cuenta cuan completa fue su obra. El nos mostró por medio de Su ejemplo, lo que es la
vida y el ministerio de un cristiano verdadero. Si queremos ser lo que Dios nos ha llamado a ser,
y hacer lo que Dios nos ha llamado a hacer, necesitamos seguir el ejemplo que El nos ha
mostrado.
En este trabajo, he querido enfatizar, con un enfoque Bíblico, la obra que la Iglesia cristiana
Evangélica ha dejado a un lado por mucho tiempo, y han sido las religiones “Humanamente
Inteligentes” las que nos han desplazado en dicha labor.
La obra social, estuvo siempre incluida en el ministerio de Cristo y la Iglesia del primer siglo.
Ellos utilizaban los recursos disponibles en su tiempo para ofrecer las respuestas efectivas a las
necesidades de las personas.
Jesucristo, usó sus dones, su poder y su Sabiduría Integral para impactar la historia, a tal punto
que esta quedo dividida por su llegada a nuestro mundo. ( a.C. d.C.)
Espero que con este escrito, podamos despertar aún más hacia nuestras responsabilidades
como hijos de Dios, coherederos del Reino y el organismo vivo que somos, capacitados con el
poder de lo alto que nos ha dado el Señor a través de su Santo Espíritu. El Cuerpo de Cristo.
¡Su Iglesia!
BASES BÍBLICAS
ISAÍAS 61:1-4--LUCAS 04:18-19
SANTIAGO 2:14-17
ISAÍAS 58:6-12
1. La Obra de Jesús y nuestra responsabilidad como Siervos suyos.
ISAÍAS 61:1-4 Lucas 04:18-19

1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque


me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas
nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de
corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos
apertura de la cárcel; 2 a proclamar el año de la buena
voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios
nuestro; a consolar a todos los enlutados; 3 a ordenar
que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de
ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría
en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados
árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya.
4 Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los
asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades
arruinadas, los escombros de muchas generaciones.
Este pasaje del libro del Profeta Isaías, arroja tal
claridad sobre el ministerio del Señor Jesús, que no
deja ningún lugar a dudas acerca de la obra que El
Padre le encomendó. El hecho de que haya sido
precisamente este texto, el que leyera Nuestro Señor
unos 700 años después, resalta la importancia, de dejar
más que por sentado, que el Evangelio del Reino, que
predicara el Salvador del mundo, consistía, a diferencia
de los mensajes de los religiosos de la época, en un
consistente hecho: ¡PROCLAMAR Y HACER EL BIEN!
Creer en Jesucristo, no consiste solamente en participar
pasivamente de los hermosos servicios ofrecidos por
nuestras Iglesias locales, aunque es parte importante, el
compartir la fe y deleitarse en armonía fraternal en los
cultos de Adoración y Alabanza, pero si hemos de
SERVIR a Cristo, es necesario que tomemos parte
“ACTIVA” en la Obra del ministerio del Evangelio. Las
Palabras del Señor son lo suficientemente concisas: “De
cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras
que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará,
porque yo voy al Padre.” Juan 14:12. Lamentablemente,
un gran porcentaje de los cristianos no han
comprendido esto, y si lo comprenden, no se han
determinado a poner “Manos a la Obra” para no solo
Impactar, sino Trastornar al Mundo, como sucedía con
la Iglesia del primer siglo.
Uno de los significados de la palabra SERVICIO, que
aparece en los diccionarios de la lengua española, es:
“Hacer las veces de otro en su oficio u ocupación”
(Diccionario de la RAE).
Si tomamos en cuenta que somos la extensión del
ministerio de Jesucristo y quedamos para hacer su
obra, entonces las funciones descritas en este texto son
también NUESTRA obra y ministerio.
Los No Alcanzado de nuestros tiempos
Es verdad, y está a la vista, que un gran avivamiento se
esta dejando sentir en Latinoamérica en estos
maravillosos tiempos, los cuales son determinantes
para lo que estará aconteciendo en los próximos años,
Pero aún, entre tanto trabajo misionero y los diversos
sistemas de evangelismo y discipulado, hay un número
de personas que ha escapado de nuestro ámbito de
acción. Esta vez no se trata de la ventana 10/40, ni las
remotas reservaciones indígenas, sino de personas que
están tan cerca de nosotros, que quizás los
encontremos a las puertas de nuestras casas, en los
estacionamiento de los mercados y los centros
comerciales, en las aceras, o debajo de los puentes,
estamos hablando, de los indigentes, drogadictos,
alcohólicos y mendigos.
No estoy diciendo que no hemos predicado el mensaje
de salvación a estas personas, claro que sí, les hemos
dado tratados, los invitamos a nuestras congregaciones,
donde algunos hermanos los miran como bichos raros y
otros le propinan abrazos efusivos y les brindan su
mejor sonrisa como queriendo decir: “en esta Iglesia no
hacemos acepción de personas.” Incluso les hemos
llevado a algún centro de rehabilitación y nos hemos
sentido orgullosos de nuestra labor. Pero… ¿Sabemos
que pasa luego con esas personas? ¿Cuántos de
nosotros les hemos visitado y ayudado a cubrir sus
necesidades básicas? ¿Tiene nuestra Iglesia local algún
programa social de ayuda a estas personas?
2. La fe sin obras es muerta
Santiago 2:14-17
14 Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice
que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? 15
Y si un hermano o una hermana están desnudos, y
tienen necesidad del mantenimiento de cada día, 16 y
alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y
saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias
para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? 17 Así también la
fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.
Lo que llevo al Apóstol santiago a escribir su epístola,
no podemos saberlo a ciencia cierta, pero si podemos
asegurar con firmeza lo que sus palabras nos
transmiten.
La frivolidad de una Iglesia que comenzaba a apostatar
de su fe en el más puro sentido de las Buenas Noticias
de Jesucristo. Seguramente, para ese tiempo ya
comenzaban a mostrarse los signos de una religiosidad
seca, que pervertía la pureza de un mensaje de piedad
y salvación, que se caracterizaba primordialmente por
una manifestación visible del Mensaje del Evangelio.
El énfasis del Apóstol en su carta, es hacia una fe viva,
que se expresa en la forma de actuar, no solo del
creyente en particular, sino de de la comunidad de
creyentes en general.
Ya no estamos hablando de Salvación, la cual se
obtiene únicamente por la Gracia del Hijo de Dios,
mediante la fe en su vida, muerte y resurrección, sino el
mensaje que llevamos al mundo a través de nuestro
estilo de vida, y el como afectamos a nuestro entorno,
respaldando lo que predicamos con nuestras acciones y
el como presentamos a Cristo a los necesitados.
La Acción Social de Jesús
• Jesús SANABA a las multitudes (Mt 12:15)
• Jesús ALIMENTABA a las multitudes (Mt 15:29-39)
• Jesús OFRECE MORADA (Jn. 1, 35-43)) (Jn 14:2)
• Jesús SENTÍA PIEDAD por las multitudes (Mateo 9
35-38)
• Jesús ACTUABA utilizando los recursos disponibles
en su tiempo
Mateo 9 35-38
“Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas,
enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el
evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda
dolencia en el pueblo. Y al ver las multitudes, tuvo
compasión de ellas; porque estaban desamparadas y
dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces
dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, más
los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies,
que envíe obreros a su mies.”
Por último, este texto Bíblico acerca del verdadero
ayuno,
3. El verdadero ayuno
Isaías 58:6-12
6 ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las
ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y
dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo
yugo? 7 ¿No es que partas tu pan con el hambriento, y
a los pobres errantes albergues en casa; que cuando
veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu
hermano? 8 Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu
salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante
de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia. 9
Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá
él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el
dedo amenazador, y el hablar vanidad; 10 y si dieres tu
pan al hambriento, y saciares al alma afligida, en las
tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el
mediodía. 11 Jehová te pastoreará siempre, y en las
sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y
serás como huerto de riego, y como manantial de
aguas, cuyas aguas nunca faltan. 12 Y los tuyos
edificarán las ruinas antiguas; los cimientos de
generación y generación levantarás, y serás llamado
reparador de portillos, restaurador de calzadas para
habitar.
Este tipo de ayuno, no tiene que ver con la negación de
la comida, más bien trata de negarse a si mismo
escogiendo vivir para Dios y para otros. No dura solo un
día más bien es un estilo de vida. El estilo de vida de un
verdadero cristiano, que ha comprendido bien lo que
significa servir a Cristo.
Dios Nos Pide Que Ayunemos Así:
• Desatar las ligaduras de impiedad.
• Soltar las cargas de opresión.
• Dejar ir libres a los quebrantados.
• Romper cada yugo.
• Partes tu pan con el hambriento.
• Albergues a los pobres errantes.
• Cubrir el desnudo al verle así.
• No esconderte de tu hermano.
• Quitar el yugo de en medio de ti, el dedo amenazador
y el hablar vanidad.
Este tipo de ayuno es el que logrará TRASTORNAR el
mundo, es verdad que trae consigo mucha demanda
espiritual, emocional y material. Pero ve Dios nos
apoyará cuando nos determinemos a negarnos a
nosotros mismos para vivir en favor del pobre y
oprimido.
o Tu luz vendrá como el alba.
o Tu sanidad aparecerá pronto.
o Tu rectitud irá delante de ti.
o El Señor será tu retaguardia.
o Cuando clames, el Señor contesta.
o Cuando pides ayuda, Dios te dirá, "Aquí estoy yo".
o Tu luz subirá en la oscuridad.
o Tu noche será como el mediodía.
o El Señor te guiará siempre.
o Satisfará tus necesidades.
o Dará vigor a tus huesos.
o Serás como un jardín bien regado.
o Serás un manantial que fluye.
o Tu descendencia reconstruirá las ruinas antiguas.
o Repararás y restaurarás la sociedad.
“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere
venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su
cruz, y sígame.” Mt 16:24

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