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PROGRAMA DE PROFECIA.
I. GENERALIDADES.
Se consideran los temas proféticos que presentan estos dos libros. Las profecías de Daniel,
sus visiones y enseñanzas se contemplan con el contenido de Apocalipsis.
III. OBJETIVOS.
3.1. ACTITUDES.
3.1.1. Sentir la necesidad de que los principios aprendidos efectúen cambios positivos
en el carácter y personalidad de uno mismo.
3.1.2. Admirarse al ver cómo Dios es fiel para ofrecer su gracia y el evangelio a la
humanidad aun cuando se le rechaza continuamente.
3.1.3. Agradecer al Señor su disposición de revelarnos sus propósitos eternos.
3.2. CONOCIMIENTOS.
3.2.1. Familiarizarse con varias interpretaciones de estos dos libros con énfasis sobre la
posición doctrinal de las Asambleas de Dios.
3.2.2. Saber las reglas hermenéuticas apropiadas para una interpretación correcta de
pasajes profeticos.
3.2.3. Presentar en forma clara un esquema de los eventos futuros a base de las
enseñanzas de estos dos libros.
3.3. HABILIDADES.
3.3.1. Aprender a interpretar pasajes proféticos en una forma sana.
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3.3.2. Predicar y enseñar sobre estos libros para que los creyentes sepan discernir los
tiempos y reafirmen su fe.
3.3.3. Distinguir entre las partes simbólicas y las de sentido recto, o sea literales, de
estos dos libros.
V. SUGERENCIAS METODOLOGICAS.
5.1. Se deben usar dibujos y láminas que ilustren el plan profético. Sería de beneficio
para el estudiante preparar sus propias ilustraciones y graficas de estos dos libros para
usarlas en su ministerio.
5.2. Se necesitan mapas para trazar la sucesión de los imperios de Daniel, y buscar en
libros históricos la corroboración secular del cumplimiento previsto por Daniel y por Juan
en su revelación.
5.3. Se puede seleccionar de una lista el tema que prefieran para un estudio
bibliográfico.
5.3.1. Profecías cumplidas en: El A.T., El tiempo de Cristo; Los tiempos modernos.
5.3.2. El estado de Israel hoy y su futuro.
5.3.3. El rapto.
5.3.4. La tribulación.
5.3.5. El Anticristo en el libro de Daniel, las epístolas y el libro de Apocalipsis.
5.3.6. Las dos hoces de Apocalipsis 14:14-20.
5.3.7. Las condiciones en la tierra durante el reinado milenial de Cristo.
5.4. El estudiante hará una colección de recortes de periódicos que contengan noticias
de cumplimientos actuales de alguna profecía. Esta práctica bien podría servir como punto
de partida para un programa radial o una columna semanal y el periódico local.
5.6. Hacer todas las comparaciones posibles entre pasajes afines de ambos libros.
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VI. CRITERIOS GENERALES DE EVALUACION.
Estudio bibliográfico 15%
Preparación de los dos mensajes 20%
Preparación de graficas para la enseñanza de esta materia 10%
Contestación del cuestionario de los libros de texto 20%
Primer examen 10%
Segundo examen 10%
Examen final 15%
Total 100%
VII. BIBLIOGRAFIA.
Daniel
De Almedia, Abraao. Las visiones proféticas de Daniel. EV, 1986, 219 páginas.
Carballosa, Veis L. Daniel y el reino mesiánico. PPE.
Martota, V. La última semana de Daniel (d). CBP.
Apocalipsis
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DANIEL Y APOCALIPSIS.
Daniel, el cuarto de los llamados “profetas mayores”, es el principal personaje bíblico que
lleva este nombre, autor del libro que lleva su nombre, muy estimado entre los judíos de
todos los tiempos, Mt. 24:15, descendiente de la familia real de David, Dn. 1:3, que fue
llevado cautivo a Babilonia cuando era jovencito, en el año tercero del reinado de Joacin
de Judá (600 a.C.).
Fue escogido con tres compañeros suyos, Ananías, Misael y Asarías – para residir en la
corte de Nabucodonosor, en donde hayo favor como José en Egipto, e hiso grandes
progresos en la ciencia de los caldeos, así como en la lengua sagrada; pero rehusó
contaminarse comiendo de las provisiones de la mesa del rey, que era a menudo
ceremonialmente impuras para un judío, o estaban manchadas por haber estado en
contacto con el culto idolatra.
Al fin de unos tres años de educación, Daniel y sus compañeros aventajaron a todos los
demás y recibieron buenos empleos en el servicio real. Allí Daniel desplego en breve sus
dones proféticos, interpretando un sueño de Nabucodonosor, por quien fue hecho
gobernador de Babilonia y jefe de la clase instruida y sacerdotal. Parece haber estado
ausente, quizás en alguna embajada extranjera, cuando sus tres compañeros fueron
arrojados en el horno ardiendo.
Después de la captura de Babilonia por los Medos y Persas, Darío el Medo, que “tomo el
reino” después de Belsasar, le hiso “primer presidente” de unos 120 príncipes. La envidia
hiso que formara el complot para que se le echara a la cueva de los leones, acto que les
atrajo su propia destrucción, Dn. 6.
Daniel continuo en todos sus altos oficios, gozó del favor de Siro hasta su muerte. Durante
este período trabajó fervorosamente, con ayunos y oraciones, así como tomando medidas
oportunas para asegurar la vuelta de los judíos a su propia tierra, habiendo llegado para
ellos el tiempo prometido, Dn. 9.
Daniel siguió siempre la voluntad de Dios. Tanto su juventud como su vejez fueron
igualmente consagradas a Dios. Conservo su honradez en circunstancias difíciles, y en
medio de la fascinación de una corte oriental, fue puro y justo. Confesó el nombre de Dios
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ante los príncipes idólatras, y estuvo a punto de ser mártir, de no haber sido por el milagro
que lo preservo de la muerte.
LIBRO DE DANIEL.
En la LXX, así como en nuestras versiones españolas, figura después de Ezequiel, entre los
profetas del A.T., en tanto que en el canon hebreo se halla en la tercera división del
canon, entre los Hagiógrafos. Daniel recibe el nombre de profeta, Mt. 24:15, y es además
contado entre los mayores. Su vida difirió de la de los otros profetas, en que el fue un
funcionario estatal, ocupado en los asuntos públicos del reino de Babilonia. La mayor
parte de sus libros esta en hebreo, pero un fragmento se halla en arameo, la lengua
comercial y diplomática de su tiempo. Este fragmento en arameo, relata casi
exclusivamente la vida de los judíos en tierra extraña, las acciones de los reyes gentiles, y
las profecías con respecto a los imperios gentiles; empieza en el cap. 2, a mitad del
versículo 4, y termina en el versículo 28 del cap. 7.
1. Introducción: Daniel y sus tres compañeros se preparan para su obra (cap. 1).
2. En una corte extranjera, entre personas mayoritariamente paganas, Dios se sirve
del testimonio de los cuatro jóvenes para manifestar su omnipotencia,
controlando los poderes de este mundo y la relación de ellos con el Reino de Dios
(cap. 2-7).
Esta sección está escrita en arameo. Incluye el sueño que tuvo Nabucodonosor de una
estatua hecha de cuatro materiales distintos, y el relato de su destrucción (cap. 2), la
tentativa de matar a los tres compañeros de Daniel, y su liberación del horno de fuego
ardiente (cap. 3); el sueño de Nabucodonosor acerca del árbol talado, que era una
representación de él mismo (cap. 4); la escritura sobre la pared, durante el banquete de
Belsasar (cap. 5); el complot contra la vida de Daniel, y su liberación del foso de los leones
(cap. 6); la visión que tuvo Daniel de cuatro animales y de uno semejante a un hijo del
hombre (cap. 7); este último pasaje en orden cronológico constituye la transición entre las
secciones 2 y 3.
Los cuatro imperios de Daniel. Las cuatro partes de la estatua que es hecha caer por una
piedra, y los cuatro animales a los que les sucede uno semejante a un hijo de hombre
(cap. 7, vv. 13-14; 17-18), designan cuatro poderes mundiales a los que finalmente
sucederá el reino de Dios. La estatua nos muestra de manera que un gobernante pagano
le parecería de esplendor imponente; los cuatro animales las representan ante el profeta
en su feroz brutalidad. Son más de cuatro imperios los que han existido sobre la tierra;
pero solamente tienen carácter profético los que tienen un papel en relación directa con
la nación de Israel, reconocida como tal en Palestina. Cubren todos ellos los “tiempos de
los gentiles” (Lc. 21: 24), que tuvieron su inicio con la destrucción de Jerusalén y de la
nación judía por Nabucodonosor, rey de Babilonia y que tendrá fin cuando el reinado de la
bestia sea destruido por el Señor a su retorno.
El primer imperio es Babilonia. (Dn. 2:37-38), que expulso a los judíos de su país.
El segundo imperio aparece en tres ocasiones (2:32, 39; 7:5; 8:3-7). Se halla
repetidamente sus características (por ejemplo, su dualidad), en los brazos y el torso de la
estatua, en los costados desiguales del segundo animal, y en los dos cuernos desiguales
del carnero. Dn. 8:20, lo identifica de manera expresa con los reyes de Media y de persa.
Ellos fueron los que permitieron el retorno de los auxiliados (Esdras 1:1-2).
El tercer imperio es Grecia (2:32-39; 7:6; 8:5-8). Sus principales características son la
velocidad y la extensión de sus conquistas; domina toda la tierra (2:39), es rápido como el
leopardo y como el ave (7:6); iba por toda la tierra sobre su superficie sin tocarla (8:5); su
primer rey, Alejandro, murió súbitamente sin dejar descendientes (8:8; 11:4); su imperio
fue dividido en cuatro (7:6; 8:8; 11:4); este imperio recibe de una manera expresa el
nombre de Javan (Grecia, 8:21). Los judíos retornados a palestina sufrieron terriblemente
en su propio territorio, la guerra incesante que mantuvieron dos de las divisiones del
imperio griego, el Egipto de los ptolomeos (el rey del sur), y la siria de los Seléucidas (el
rey del norte: Dn. 11). El peor perseguidor de Israel fue un rey de Siria, Antíoco IV Epifanes
(175-164 a.C.), prefigurado por el “cuerno pequeño” de Dn. 8:9-14, 23:25; 11:21,36. Loco
de soberbia, pretendiendo proceder de Júpiter, quiso imponer a la fuerza su culto; intento
destruir todas las copias de la Ley, profano el templo de Jerusalén y erigió lo que el
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profeta había denominado “la abominación desoladora” (8:11-12; 11:31). A causa de todo
esto, este rey, por otra parte insignificante, es considerado como un tipo de Anticristo.
El cuarto imperio no es nombrado, pero no puede ser otro que el de Roma. Este es,
efectivamente, el que en la historia sucedió al de Grecia. Aplastando toda resistencia,
estableció un imperio todavía más universal (2:40; 7:7; 19,23) fue Roma la que crucificó al
Mesías y destruyo Jerusalén en el año 70 d. C. Expulsando a los judíos de palestina (9:26).
Su imperio estuvo largo tiempo dividido en dos partes, como las piernas de la estatua. En
su visión profética, Daniel vio subsistir este cuarto imperio hasta el fin de los tiempos, bajo
la forma de una confederación de 10 caudillos (2:34; 7:7,24). Es de su seno que surgirá el
Anticristo, terrible perseguidor del pueblo de Dios, que será destruido por la venida
victoriosa del Hijo del Hombre (7:8, 11, 13-14, 21-27). El Apocalipsis vuelve a tomar la
imagen de la bestia monstruosa con 10 cuernos. Allí esta bestia representa al Anticristo y
su imperio con toda su crueldad, su revuelta contra Dios, su dominio universal (13:1-8), su
confederación de 10 dictadores (17:12,17), su evidente relación con Roma (17:9,18). Juan
expresa en estos términos el hecho de que, según la profecía bíblica, el cuarto imperio de
Daniel existirá aun hasta el fin de los tiempos: “la bestia que has visto, era, y no es;… y los
moradores de la tierra… se asombraran viendo la bestia, que era y no es, y será” (17:8). Lo
que ha dejado de existir en el territorio del antiguo imperio romano es la cabeza común. El
Anticristo será el agente coordinador y a partir de esta base, llevara a cabo el viejo sueño
de todos los conquistadores: imponer que toda la raza le adore (13:3, 7-8).
¿Cuál es el punto de partida de las 70 semanas? Según el v. 25, tiene su inicio “desde la
salida de la orden para restaurar y edificar Jerusalén”. Se menciona otros decretos con
respecto al retorno de la cautividad: 1 de Ciro (Esdras 1:1-3) 1 de Darío (6:3-8), y 2 de
Artajerjes (7:7; Neh. 2:1-8). Los comentaristas han diferido a este respecto, pero parece
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más lógico tomar como punto de partida el último, el único que menciona la
reconstrucción y no solo el templo, sino de la ciudad, este decreto se promulgo el 445 a.C.
los tres periodos indicados se sitúan a partir de esta fecha, de la siguiente manera: Habrá
7 semanas durante las que la ciudad y sus murallas serán reconstruidas , tiempo de
angustia de 49 años (7 x 7) lo cual se corresponde con las épocas difíciles de Esdras y
Jeremías, después hay 62 semanas entre esta época y la manifestación del Mesías,
seguida de su muerte. Ello suma, para los dos primeros periodos, un total de 69 semanas,
o 483 años (69 x 7), que trascurrieron sin interrupción, ello nos lleva exactamente al
periodo de la manifestación pública y triunfal de Jesús del Domingo de Ramos, su entrada
en Jerusalén, cuando fue aclamado con hosannas al hijo de David. Recuérdese que en
esta ocasión, a diferencia de las precedentes en que el pueblo quería proclamar rey,
acepto las aclamaciones, reprendió a los que querían acallarlas. Para evidenciar la
cronología exacta del cumplimiento de la profecía hasta el Mesías príncipe, se tiene que
contar el año como los profetas, un año de 360 días (42 meses = 1260 días) para
restablecer la correspondencia entre el calendario judío y el calendario juliano.
Después de las 62 semanas se quitara la vida al Mesías (v. 26). Nótese la clara implicación
de este versículo, de que el inicio de la semana N° 70, no es consecutivo al final de la
semana 69, porque tiene lugar una serie de hechos después del final de las primeras 62
semanas, y antes del inicio de la ultima, esta última semana se relaciona claramente con la
carrera del Anticristo, conduce directamente al final de los tiempos de las naciones, esto
es, hacia el milenio, y el cumplimiento de todas las promesas relacionadas con Israel, y
dadas en el v. 24. La profecía divide en dos partes iguales los siete años de esta semana,
un periodo de paz, que quizás siga a la guerra del bloque del norte (cp. Ez. 38-39), un
periodo de gran tribulación correspondiente a los 3 ½ años indicados expresamente por
los textos citados; esto es lo que sigue de la indicación de la ruptura de la alianza con
Israel por parte del Anticristo a la mitad de la semana (9:27).
Si la profecía con respecto a la primera venida de Cristo se cumplió de una manera tan
admirable, ¿cómo se puede dudar de la exactitud de los sucesos y del tiempo anunciado
para la última etapa? Es también entre la semana 69, que se cierra con la manifestación
del Mesías príncipe en la entrada triunfal en Jerusalén (cp. Mt. 21:1-9; Mr. 11:1-11; Lc.
19:28-40; Jn. 12:12-16) y la semana 70, que inaugura la carrera del Anticristo, que se tiene
que situar necesariamente dentro de este intervalo, la era de la iglesia, durante la que
Israel no es reconocido por Dios.
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RESUMEN DE LAS PRINCIPALES PROFECIAS DEL LIBRO DE DANIEL.
La caída del imperio occidental fue en el año 476 d.C. la caída del imperio oriental fue en
el año 1453 d.C. La sucesión de emperadores termino en 1806 d.C. cuando Napoleón
Bonaparte era emperador de Francia. Desde entonces el imperio romano desapareció
totalmente en el aspecto político, pero no así en el aspecto religioso.
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profeta, que prepararan el terreno para la aparición del Anticristo que sin duda será un
judío de la dispersión, Gn. 49:16-17.
LIBRO DE APOCALIPSIS.
A. Nombre: Apocalipsis.
La Biblia menciona varios velos. Cada uno de estos velos ocultaba algo, hasta que alguien
los quitó.
Apocalipsis quita el velo en dos sentidos. Primero, nos revela a Cristo en su gloria.
Miraremos ilustraciones de Cristo en el capítulo 2 y a través del libro. Segundo, aparta el
velo que oculta los acontecimientos futuros, incluyendo el retorno de Cristo para derrotar
el mal. No trate de separar a la persona de la profecía del futuro. En el Apocalipsis los dos
temas están entrelazados, la revelación de Cristo y su victoria futra.
La primera forma es apocalíptica. Este último libro de la Biblia comienza con “La
revelación” o “Apokalupsis”, Ap. 1:1. Esta forma de escrito usa visiones y símbolos
para revelar el futuro. Otros ejemplos de escritos apocalípticos son Ezequiel,
Daniel y Zacarías.
La segunda forma es profética. Juan se refiere a “las palabras de esta profecía”,
Ap. 1:3. Los escritos proféticos dan la Palabra de Dios que se refiere al presente y
al futuro y estos, en general, tienen menos visiones.
La tercera forma es la carta. Juan escribió Apocalipsis como una carta “a las siete
iglesias”, Ap. 1:4. Desde el saludo hasta el capitulo 22, Apocalipsis es una carta.
Otros ejemplos de cartas en la Biblia son las de Pablo y Pedro.
El Espiritu Santo guió e inspiró a cada escritor de la Biblia. Creemos que el autor de
Apocalipsis es el apóstol Juan, el hijo de Zebedeo y hermano de Jacobo. Hay por lo menos
cinco razones por las cuales afirmamos que el apóstol Juan es el autor.
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El autor menciona “Juan” como su propio nombre cuatro veces, Ap. 1:1, 4, 9;
22:8. El libro revela que era judío, conocedor de las Escrituras. También está claro
que todo lo que tenía que hacer es mencionar su nombre para que las siete iglesias
lo reconocieran. Por esa razón la mayoría de los eruditos de la Biblia reconocen al
apóstol Juan como el muy conocido y profundamente espiritual escritor.
El autor estaba sufriendo y condenado a morir. Esto respalda lo que Jesús le
predijo a Juan acerca de su sufrimiento. Acuérdese de lo que el Señor les dijo a
Jacobo y a Juan que ambos beberían de su vaso de sufrimiento, Mt. 20:20-23.
Jacobo fue decapitado y Juan probablemente fue condenado a morir en la isla de
Patmos.
El Espiritu Santo inspiró a Juan a escribir su Evangelio y sus tres Epístolas. Hay
frases y temas en Apocalipsis que son los mismos de los escritos anteriores de
Juan. Por ejemplo, Juan presenta a Jesús como el Verbo en Juan 1:1 y 14 y
nuevamente en 1 Juan 1:1. Luego en Apocalipsis también se refiere a Jesús como
“el Verbo de Dios”, Ap. 19:13.
El apóstol Juan probablemente escribió Apocalipsis alrededor del año 95 d.C. Esta es la
fecha en que concuerdan la mayoría de los padres de la iglesia y los historiadores. El
emperador romano de ese tiempo era Domiciano que era un César cruel que reinó desde
el año 81 al 96 d.C.
C. Contexto histórico.
1. La situación del Apóstol Juan. Juan nos relata que él estaba sufriendo en la isla de
Patmos cuando escribió Apocalipsis Ap. 1:9. Esta isla se halla en el Mar Egeo, cerca
de las siete iglesias de Apocalipsis 2-3. Patmos era un lugar al cual el gobierno
romano enviaba a los criminales a morir. Por lo tanto Juan no se hallaba solo en
Patmos. El emperador romano, Domiciano, probablemente exiló a Juan a Patmos
por dos razones que fueron no adorar al César y predicar que Jesucristo es Señor.
2. Las circunstancias de los primeros lectores de Juan. Cuando Juan estaba
escribiendo Apocalipsis los cristianos se enfrentaban a la persecución. Domiciano
impuso una ley, por la cual ordenaba que todos debían arrodillarse delante de él y
adorarle como a un dios. Pero los fieles cristianos afirmaban que Jesucristo es
Señor y se negaban a adorar a los césares romanos y esto era motivo para perder
el trabajo. Los fieles cristianos vinieron a ser conocidos como enemigos del
gobierno. Por lo tanto, la lealtad a Jesús trajo la persecución.
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Varios versículos en Apocalipsis mencionan la persecución.
El Señor advierte a los creyentes de Esmirna que van a sufrir aun mas, Ap. 2:10.
El Señor advierte a los creyentes de Filadelfia de la hora de prueba que ha de venir
sobre toda la tierra, Ap. 3:10.
Antipas ya había sido martirizado por su testimonio en Cristo, Ap. 2:13.
El quinto sello revela que muchos creyentes ya habían sido martirizados, Ap. 6:9-
11.
3. La ubicación de los primeros lectores (Apocalipsis 1:4; 9-13, 19-20). Los libros del
N.T. son para toda la iglesia. Sin embargo, fueron escritos para ciertas personas o
iglesias. Juan escribió Apocalipsis a las siete iglesias de Asia, Ap. 1:4. El mensaje
que el Espiritu Santo le inspiró a escribir es para todos los creyentes en todo
tiempo. Pero para interpretar correctamente Apocalipsis, tenemos que entender
tanto como sea posible acerca de los primeros lectores.
Juan enfatizó que rechazar a la bestia significa persecución. A su asistente, el falso profeta,
se le dio poder para matar a todos aquellos que no adoraban a la bestia, Ap. 13:15.
Aquellos que rehúsan serle leales no pueden comprar ni vender, Ap. 13:16-17. Aun así,
Juan animó a los creyentes a mantenerse firmes. Dios dará una corona de vida a aquellos
que son fieles hasta la muerte, Ap. 2:10.
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E. Personajes en Apocalipsis.
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rica, los 144.000, una gran multitud con ropas blancas, todos los muertos que se
15. Otros levantaron y la gente sobre tronos. Asimismo, encontramos cosas y criaturas que
actúan como humanos. Un águila grita con una voz fuerte, 8:13. La tierra abre su
boca, 12:16. Un altar responde a Dios, 16:7. La nueva Jerusalén viene como una
novia, 21:9-10. Finalmente la muerte y el Hades serán juzgados como otros
enemigos de Dios. Así Apocalipsis tiene una lista grande y variada de personajes.
Todos estos participan en la historia de la victoria final de Dios sobre la maldad.
Hay cuatro puntos cardinales principales en la tierra. Así mismo, hay cuatro formas
diferentes en que los creyentes interpretan Apocalipsis.
El primero es el punto de vista pasado o *preterista. Los que mantienen este punto de
vista dicen que Apocalipsis 1-18 sucedió en el primer siglo. Ellos opinan que las profecías
de Apocalipsis fueron cumplidas cuando los primeros cristianos tuvieron que luchar contra
Roma. Por lo tanto, para los que tienen este punto de vista, Apocalipsis dice muy poco
acerca del futuro.
El segundo punto de vista es el *historicista. Los cristianos que hacen esta clase de
interpretación también se limitan al pasado. Pero difieren de los de interpretación
preterista en que no limitan Apocalipsis a los primeros cien años de la iglesia. En cambio,
tratan de ajustar Apocalipsis con acontecimientos de la historia de la primera iglesia y
hasta el presente. Los eventos claves que este punto de vista trata de enfatizar, son tales
como el surgimiento del Papa y las Cruzadas. Los que siguen el punto de vista histórico no
ven la gran tribulación como el final de los tiempos. Más bien, distribuyen la tribulación y
otros acontecimientos a lo largo de la historia de la iglesia. El problema con esta
interpretación es que cada generación interpreta Apocalipsis de una manera distinta.
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sucederá. Dicen que el libro enfatiza la lucha espiritual y el triunfo de Dios sobre el mal. El
problema de este punto de vista es que contradice otras Escrituras. Por ejemplo, Pablo no
dice que el Anticristo es solamente una idea, sino enseña que el Anticristo es una persona
real, 2 Ts. 2:3-12. No podemos aceptar una opinión como esta, pues no está de acuerdo
con el resto de la Biblia.
Juan vio el imperio romano como una gran bestia que odiaba a la iglesia. De todos modos,
en los últimos días, habrá otra bestia como el imperio romano. Esta bestia perseguirá a
todos los creyentes y gobernará durante los 7 últimos años de la tribulación. No debemos
olvidar que muchas veces las profecías se cumplen de dos maneras. Puede haber un
cumplimiento histórico, pero también un cumplimiento en los últimos días. Por ejemplo,
en Mateo 24 Jesús profetizó muchos acontecimientos. Algunos de ellos se cumplieron
históricamente en los años 70 d.C. Pero su cumplimiento mayor será al final de los siglos.
B. Permita que Apocalipsis mismo explique sus símbolos, hasta donde sea posible.
Quizás Dios permitió a Juan usar símbolos para proteger a los cristianos. Únicamente los
cristianos pueden discernirlos y comprenderlos. Los enemigos de Jesús no pudieron usar
sus parábolas para condenarles. Igualmente, los enemigos de los cristianos no pudieron
usar los símbolos de Apocalipsis para condenar a estos.
Pero hay una razón aun mayor por la que Juan usó símbolos. Estos ilustran las palabras y
añaden emoción y valor a la verdad. Juan pudo haber escrito que Jesús se paseaba entre
las 7 iglesias. Sin embargo, al mencionar el candelero en vez de la palabra iglesia, nos da
una imagen. El candelero nos recuerda que las iglesias están en el mundo para luz a las
tinieblas. Igualmente, Juan pudo haber dicho que un líder cruel se levantaría para regir el
mundo. Pero él hablo de una bestia a cambio de las palabras líder cruel. El símbolo de la
bestia enfatiza la clase de líder que será el Anticristo. Nuevamente, Juan hizo un contraste
entre una novia y una ramera, a cambio de simplemente contrastar la iglesia con el
mundo. Los símbolos comunican la verdad de una manera poderosa y emocionante.
Es importante permitir que Apocalipsis explique sus símbolos. Las palabras que hoy
comprendemos mejor son aquellas que Jesús mismo explicó. Del mismo modo,
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comprendemos mejor en Apocalipsis lo que Juan nos explica. La tabla siguiente nos
muestra en la columna de la izquierda muchos de los símbolos de Apocalipsis y las
referencias correspondientes. La columna de la derecha nos da la referencia en
Apocalipsis donde Juan interpreta el significado de sus símbolos.
Hay un gran contraste entre Daniel y Apocalipsis. Daniel era un libro cerrado. Dios dijo a
Daniel, “cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin”, Dn. 12:4. Pero Dios dijo
a Juan todo lo contrario de lo que había dicho a Daniel. El Señor dijo a Juan, “no selles las
palabras de este libro, porque el tiempo está cerca”, Ap. 22:10. Estamos viviendo en los
últimos días. Por lo tanto, Dios quiere que nosotros comprendamos lo que se acerca. A
diferencia de Daniel, Apocalipsis es un libro abierto.
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Aún así, la mayoría de las profecías de Apocalipsis son todavía para el futuro. Podemos
comprender el mensaje en general, pero encontramos difícil entender detalles
específicos. Por ejemplo, podemos comprender mucho acerca del Anticristo, pero el
Apocalipsis no nos da su nombre. Grandes líderes, como Martin Lutero y Juan Calvino,
estaban equivocados en su interpretación de Apocalipsis. Estos hombres pensaban que los
1260 días representaban 1260 años y que el Anticristo era el papa. Juan Wesley también
estaba en error al creer la teoría de los 1270 años. El esperaba que el papa fuera vencido
por Cristo en 1836. Si tales gigantes espirituales se equivocaron al interpretar Apocalipsis,
nosotros no debemos precipitarnos a sacar conclusiones.
Una voz del cielo dijo a Juan que sellara lo que decía los siete truenos, Ap. 10:3-4. Esto nos
muestra que hay ciertos eventos del futuro que permanecen como secretos de Dios.
Debemos ser humildes y admitir que todavía no sabemos todo. La advertencia de Pablo a
los corintios es buena para nosotros. “aprendáis a no pensar más de lo que está escrito”,
1 Co. 4:6. Igualmente nos puede ayudar las palabras de Moisés, “las cosas secretas
pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros
hijos para siempre”, Dt. 29:29.
Símbolos en Apocalipsis.
Los símbolos son ventanas que dan luz; sugieren las verdades y las ideas de acuerdo con
su relación y asociación. La palabra símbolo viene de dos palabras griegas: syn, que
significa “con”, y ballen, que significa “lanzar”, y en combinación sugieren “lanzar juntos”.
A menudo los símbolos son una señal visible de una cualidad o idea invisible. Por ejemplo,
el león es símbolo de coraje; la paloma, de paz; el cordero, humildad. Los símbolos
representan personas, cosas y atributos, gracias a algún rasgo de parecido entre el
símbolo y el objeto simbolizado.
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- El dragón: es tipo de poder de Satanás, 12:7; 13:2-4; 20:2.
- Las langostas: tipifican a los enemigos destructores permitidos por Dios, Is. 33:4.
- El león: símbolo de gobernantes, justos e injustos, 5:5; 13:2; 1 Pd. 5:8.
- El leopardo: ferocidad, violencia, tenacidad y venganza, Jr. 5:6; Dn. 7:6.
- El oso: es un enemigo fuerte y destructor, 13:2; Pr. 17:12; Dn. 7:5.
- Las ovejas: tipo del pueblo de Dios; se usan en relación con cristo.
- El perro: representa a los perdidos quienes carecen de sentimiento y de
conciencia.
- Ranas: son tipos de espíritus inmundos.
- La serpiente: simboliza el artificio y la astucia satánica y la sabiduría meramente
humana, 19:9; 20:2-3.
A muchos maestros de la Biblia les gusta Ap. 1:19 porque es como un bosquejo natural del
libro o una llave para interpretar el libro. Este versículo sugiere que Apocalipsis se divide
en tres partes.
Lo que has visto, se refiere a la visión que Juan tuvo de Cristo, Ap. 1.
Las que son, se refiere a las siete iglesias de Asia Menor, Ap. 2-3.
Las que han de ser después de estas, se refiere al futuro, Ap. 4-22.
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Lista de personas, elementos y acontecimientos en Apocalipsis.
Apocalipsis nos hace reflexionar en Jesucristo más que ningún otro libro lo hace. La
siguiente lista nos muestra algunas de las revelaciones que Apocalipsis nos da acerca de
Jesucristo.
Contexto histórico.
Había muchas otras iglesias en Asia Menor aparte de las siete de Apocalipsis. Un ejemplo
de ello es la iglesia de Colosas, a la cual escribió Pablo. Las siete iglesias de Apocalipsis no
eran más importantes, ni las más grandes, ni tampoco las únicas iglesias de aquel tiempo.
Pero Dios las escogió porque representaban ciertas condiciones espirituales. Por ejemplo,
lo que Juan escribió a Éfeso, otros cristianos en otros lugares lo necesitaban escuchar. Hay
tres razones por las que creemos que todos los cristianos necesitan prestar atención a los
mensajes de Juan a las siete iglesias.
Algunos comparan las siete iglesias de Apocalipsis con los siete periodos de la historia de
la iglesia.
En este punto de vista, Éfeso representa a la iglesia del año 33-100 d.C. Luego de cada una
de las siguientes seis, en su orden, representan un periodo de la historia de la iglesia.
Laodicea representa el estado final de una iglesia tibia. Esta será la apostata que quedará
después del rapto. Al emparejar cada una de las siete iglesias con un periodo de la
historia, encontramos un punto de vista interesante. Aquellos que tienen esta opinión, sin
embargo, creen que siempre hay un remanente fiel de la iglesia.
21
Tiatira 2:18- Hijo de Dios Obras, amor, Tolera a la Arrepiéntete Los Los vencedores
29 Ojos como fe, servicio. falsa de seguir los seguidores recibirán autoridad
fuego Pies Perseverancia. profetiza caminos de de Jezabel sobre las naciones y
como Algunos no Jezabel. Jezabel. sufrirán la estrella de la
bronce siguen a grandemente mañana.
bruñido Jezabel. con ella.
Sardis 3:1-6 Tiene los Obras. Algunos Tienes Sé vigilante. Los Los vencedores
siete no han nombre de Afirma las pecadores serán vestidos de
espíritus de manchado sus que vives y cosas que serán vestiduras blancas y
Dios. Tiene vestiduras. estás están para sorprendidos sus nombres no
las siete muerta. morir. cuando él serán borrados del
estrellas. Recuerda. venga. Libro de la Vida.
Obedece,
arrepiéntete.
Filadelfia Santo y Obras. Poca Reten lo que Una puerta abierta.
3:7-13 verdadero. fuerza, tienes para Cristo los guardará
Posee la guardaron su que nadie de la hora de la
llave de palabra. tome tu prueba que viene
David: abre Soportaron corona. sobre todo el
y cierra pacientemente. mundo. Jesús viene
puertas pronto. Los
vencedores serán
columnas.
Laodicea El Amén. El Ni fría ni Compra de El Señor Cristo reprende a
3:14-22 testigo fiel y caliente. Su Cristo oro, vomitará a los que ama. Si tú
verdadero. confesión vestiduras y los tibios de abres la puerta él
El que no está de colirio para su boca. entrará. Los
gobierna la acuerdo con tus ojos. Se vencedores se
creación de su sincera y sentaran con Cristo
Dios. condición. arrepiéntete. en su trono.
La ciudad de Éfeso.
Éfeso es probablemente la primera en la lista de iglesias porque era la ciudad más grande.
Estaba al lado del Mar Egeo, y era famosa por su comercio. Los barcos más grandes del
mundo podían llegar allí. Así mismo, las carreteras más grandes terminaban en Éfeso. Las
excavaciones de la calle principal de la ciudad, nos muestra que tenía 11 metros de ancho
y 529 metros de largo y era de mármol. La calle terminaba en el mar y había tienda de
negocios a lo largo de esta. Se cree que la población era de 200.000 personas
aproximadamente cuando Juan escribió el Apocalipsis.
22
Esmirna: La iglesia que fue perseguida (Apocalipsis 2:8-11).
Contexto histórico.
Estamos estudiando los mensajes de las 7 iglesias. De Éfeso nos trasladamos al norte unos
50 kilómetros. Allí encontramos la segunda iglesia, que estaba en la ciudad de Esmirna.
Hoy es la moderna ciudad de Izmir en Turquía.
En griego la palabra Esmirna significa lo mismo que mirra. Mirra o Esmirna aparece tres
veces en los evangelios.
Mateo 2:11 – los magos del Oriente trajeron oro, incienso y mirra.
Marcos 15:23 – al Señor Jesucristo le ofrecieron vino mezclado con esmirna en la
cruz.
Juan 19:39 – Nicodemo y José bajaron el cuerpo de Jesús de la cruz y lo
envolvieron en un lienzo, añadiendo unos 34 Kilogramos de esmirna y áloes.
La mirra es una recina con fragancia dulce. Para obtenerla las personas cortan la corteza
de cierto árbol en Etiopia y Arabia y esto hace que el árbol destile su fragancia dulce. Por
lo tanto para producir esmirna el árbol tiene que sufrir. Los cristianos en Esmirna sufrían
persecución, eran pobres y sufrían difamaciones.
Contexto histórico.
La ciudad de Roma era la capital de todo el imperio romano. Pero Pérgamo era la capital
romana de la región de Asia. Lo que Roma era para la mitad occidental del imperio,
Pérgamo lo era para la mitad oriental, y más que cualquier otra ciudad, parecía una cede
de autoridad. Se erguía alta y orgullosa en la cumbre de una enorme cumbre rocosa.
Pérgamo tenía una universidad y una biblioteca de más o menos 200.000 rollos. Cada uno
de estos rollos estaba escrito a mano. La ciudad es conocida también por inventar el
23
pergamino, que era una piel de oveja procesada que se usaba para escribir en ella. El
mensaje a Pérgamo incluye tres grandes verdades acerca de iglesias.
Contexto histórico.
El cuarto mensaje del Señor es para la Iglesia de Tiatira. Esta era una pequeña ciudad a
unos 64 kilómetros al sudeste de Pérgamo. Es interesante que Jesús enviara el mensaje
más largo a una iglesia tan pequeña. El no solo se preocupaba por las ciudades grandes,
sino que ama al más pequeño tanto como al más grande.
Tiatira era famosa por su producción de armas de bronce. Por lo tanto, Jesucristo se les
reveló como el rey con pies fuertes de bronce bruñido, Ap. 2:18.
Tiatira era famosa también por sus telas de púrpura. Acuérdese de Lidia, la vendedora de
telas de púrpura de aquel lugar. El Señor abrió su corazón al evangelio cuando Pablo
predico en Filipos, Hch. 16:14-15. Ella creyó en Jesús y fue bautizada. Muchos piensan que
la iglesia de Tiatira comenzó en su casa.
La tintura púrpura se fabricaba de una raíz que al hervirla en agua soltaba el color. Luego
sumergían la tela en esa solución. Después de un tiempo sacaban la tela que había
adquirido el color púrpura. En contraste, Jesús retornará con una vestidura que ha sido
sumergida en sangre, Ap. 19:13. Este versículo enfatiza la importancia de la sangre de
Jesús que nos redime. Ef. 1:7.
Contexto histórico.
Cada uno de los siete mensajes de Jesús comienza con una descripción de Jesús. El
mensaje a Sardis viene de “el que tiene los siete espíritus de Dios, y las siete estrellas”
(pastores), Ap. 3:1. Los siete espíritus parecen representar diferentes aspectos del E.S.
Isaías 11:2 se refiere al Espiritu que ungirá a Jesús. Allí, el E.S. se describe en siete
diferentes formas.
El E.S. está estrechamente vinculado con las siete iglesias y pastores, Ap. 1:4; 3:1. El
número siete muestra plenitud, integridad y totalidad. Las siete iglesias o candeleros
representan toda la iglesia. Igualmente los siete espíritus representan la plenitud y la
24
perfección de Dios, el E.S. En él hayamos todo lo que cualquier iglesia necesita en
cualquier circunstancia.
Sardis había sido una ciudad grande y poderosa cuando Ciro la conquistó en 548 a.C. pero
en los tiempos romanos la gloria la había abandonado. Igualmente, la gloria había
abandonado a la mayoría de los creyentes. En el pasado Sardis había sido una iglesia viva y
saludable, pero ya había muerto. Era como el templo de su ciudad. Un edificio enorme de
49 metros de ancho por 91 metros de largo. Tenía 78 columnas de 17.7 metros de alto.
Dos de estos pilares permanecen en pie hasta el día de hoy.
Contexto histórico.
Filadelfia sufrió muchas veces por terremotos. Cuando la tierra se sacudía, numerosos
edificios grandes y hogares se derrumbaban. Los césares romanos aportaban dinero para
la reconstrucción de la cuidad y por este motivo los ciudadanos le cambiaron el nombre a
su ciudad en honor a los césares romanos, sus salvadores. El nuevo nombre de Filadelfia
fue Nueva Cesarea, pero al pasar el tiempo, el nombre de la ciudad volvió a ser Filadelfia.
En contraste, Dios escribirá su nombre en los creyentes, en la nueva ciudad celestial.
Nosotros exhibiremos el nombre de nuestro Salvador en una ciudad permanente, Ap. 3:2,
la que ningún terremoto destruirá.
Filadelfia significa “ciudad del amor fraternal”. Sin embargo los judíos no demostraban
amor a los seguidores de Jesús. Parece que difamaban a los creyentes y le serraban la
puerta de la sinagoga. Por lo tanto, había un conflicto serio entre los judíos de la sinagoga
y los judíos de la iglesia. Los judíos que rechazaban a Cristo eran enemigos de los
cristianos y los de la sinagoga declaraban ser el pueblo escogido de Dios. Decían que los
cristianos eran blasfemos y que Dios no los amaba, Ap. 3:12. En realidad Filadelfia era una
ciudad que carecía de amor fraternal.
Contexto histórico.
El mensaje que Jesús dio a Laodicea está estrechamente relacionado con su historia.
Hasta aquí hemos estudiado el contenido del mensaje de las siete iglesias del Apocalipsis.
Estudiaremos a continuación los eventos más sobresalientes del resto del libro.
La gran tribulación es un periodo de siete años donde Dios juzgará a las naciones. Estos
siete años están divididos en tres años y medio de falsa paz y tres años y medio de guerra.
La gran tribulación comenzará con la desaparición de millones de personas que se van en
el rapto de la iglesia. Cuando la iglesia sea raptada el mundo entrará en un terrible
desasosiego y entonces aparecerá el Anticristo que gobernara al mundo entero.
En estos siete años de tribulación se derramaran 21 juicios de la ira de Dios. Siete juicios
de los siete sellos, siete juicios de las siete trompetas y siete juicios de las siete copas
Los 144.000 sellados de todas las tribus de los hijos de Israel, Ap. 7:4.
Se describe a los 144.000 como siervos de Dios, de las tribus de Israel. Dios pondrá un
sello o una marca en la frente de cada uno para indicar consagración y propiedad (cf. 9:4;
Ez. 9:1-6; 2 Tim. 2:19) algunos interpretes de la Biblia creen que estos nuevos creyentes de
las tribus de Israel. El Espiritu los comisionará y les dará poder para predicar el evangelio
durante los días de la tribulación a todos los judíos dispersos.
Juan describe una escena en el cielo de una gran multitud de personas de todas las
naciones que fueron salvadas por la fe en Cristo. Estarán con Dios, v. 15, libre de pena y
26
angustia, vv. 16-17. Muchos creen que esa multitud salvada por la sangre del Cordero son
los santos de la tribulación, porque Juan declara que “han salido de la gran tribulación” v.
14. Los que aceptan a Cristo son objetos de especial persecución por parte de Satanás y
los malvados (cf. 12:9-17)
Alguien le da a Juan una caña para medir el templo, el altar y a los que adoran. Medir es
una manera de demostrar que estos pertenecen a Dios. Juan no mide el atrio exterior.
¿Por qué? Porque aun no ha sido dedicado a Dios. Los gentiles hoyaran el atrio exterior y
la ciudad santa por 42 meses, Ap. 11:1-2.
Justo después de la discusión sobre el templo, Juan presenta a los dos testigos.
Consideremos cinco preguntas acerca de estos dos testigos.
Los dos testigos permanecerán muertos en las calles de Jerusalén por tres días y medio,
Ap. 11:8-9. Luego Dios juzgara a la ciudad que los rechazó y los mató. Mandará un gran
terremoto a Jerusalén, Ap. 11:13. Todas estas referencias a Jerusalén dan a entender que
es el centro de la actividad de los dos testigos.
2. ¿Quiénes son los dos testigos? Hay varias opiniones acerca de estos dos testigos.
Unos pocos maestros piensan que estos testigos no son humanos. Otros piensan
que soy la Ley y los profetas. Otros creen que representan al Antiguo y Nuevo
Testamento. Pero generalmente Juan nos dice cuando usa simbolismos. Creemos
que estos dos testigos son personas porque es la manera más fácil de
comprenderlos. Cuando la verdad sencilla tiene sentido no busque otro significado.
Estos dos testigos se parecen mucho a los profetas del A.T.
Juan compara a los testigos con varios ministros bíblicos. Dice que son dos olivos y dos
candeleros, Ap. 11:4. Con esto los compara con Zorobabel y con Josué el sumo sacerdote,
Zac. 3-4. Los dos testigos también son semejante a Moisés, pues pueden transformar el
27
agua en sangre y traer plagas sobre la tierra, Ap. 11:6; Ex. 7-11. Por otro lado, también se
parecen a Elías en dos maneras. Pueden hacer descender fuego para destruir a sus
enemigos y pueden cerrar los cielos para que no llueva durante tres años y medio, Ap.
11:5-6; 2 Rey. 1:10-12; Stg. 5:17.
Algunos dicen que los dos testigos son Enoc y Elías. Se basan en Hebreos 9:27, que habla
de muerte y juicio. Siendo que Enoc y Elías no murieron, ellos piensan que deben morir
en la tribulación. Pero muchos creyentes no tendrán encuentro con la muerte, porque
todos los que sean llevados en el rapto no morirán, 1 Ts. 4:17; 1 Co. 15:51. Hebreos 9:27
no dice que todos deben morir, sino solamente hace énfasis que después de la muerte
viene el juicio. No hay una segunda oportunidad para creer después de la muerte. Por lo
tanto, Hebreos 9:27 no nos ayuda a identificar a estos testigos.
Como hemos visto, Juan compara a estos dos testigos con Zorobabel, Josué, Moisés y
Elías. Pero el ministerio de estos dos testigos es mayor que el ministerio de cualquiera de
estos siervos del A.T. Moisés no podía enviar plagas según su voluntad. Elías no fue
conocido por enviar plagas. Los dos testigos ministraran con el espíritu y el poder de
Moisés y Elías. Juan el Bautista vino con el espíritu y el poder de Elías, pero aun así, él no
era el mismo Elías. Así, no esperamos que estos dos testigos sean iguales a sus
antecesores. Probablemente estos dos hombres serán judíos llenos del E.S. Dios los ungirá
de una manera poderosa, como lo hizo con Moisés y Elías.
3. ¿Cuándo ministraran estos dos testigos? Juan nos dice que ellos ministraran
durante 1260 días, Ap. 11:3. Esto es lo mismo que 42 meses, o sea la mitad de la
tribulación. Por lo tanto, esto dos testigos estarán ya sea en la primera o en la
última parte de los siete años de la tribulación.
4. ¿Cuál es el propósito de los dos testigos? Juan dice que están vestido de silicio,
Ap. 11:3. El silicio negro enfatiza un llamado al arrepentimiento. Los judíos
fabricaban el silicio de cabra negra y lo usaban para mostrar tristeza o
arrepentimiento, Gn. 37:34.
5. ¿De qué manera responderá la gente a estos dos testigos? El Anticristo matará a
los dos testigos después que ellos terminen su ministerio. Dios protegerá a sus
testigos hasta que el ministerio de ellos en la tierra esté completo. Luego ellos
aparecerán muertos en la calle por tres días y medio; es un día por cada año de
ministerio. Esta es una manera vergonzosa de tratar a cualquiera. Apocalipsis 11:9
nos dice que la gente de todo el mundo contemplará los cuerpos muertos.
28
La mujer y el dragón, Ap. 12.
No estamos seguros del lugar que Dios ha preparado para los judíos fieles. Sin embargo,
no es importante para nosotros saber el lugar exacto. Lo que importa es darnos cuenta de
la gran verdad de que Dios protege a su pueblo durante los tiempos difíciles, Rom. 8:35-
39.
El falso profeta influencia a las personas a tomar la marca del Anticristo, Ap. 13.
Había varias clases de marca en los días de Juan. Algunos lo hacían en los animales, otros
eran estampadas en papeles importantes. La palabra marca también describe la imagen
de un gobernador estampada en una moneda. En los días de Juan no se usaba marca,
tatuajes o sellos sobre persona alguna. Esto respalda la idea de que la marca de la bestia
aun es para el futuro.
Una marca de nota propiedad. Dios puso una marca en los 144.000 porque le pertenecen
a él, Ap. 7:13. En contraste, el Anticristo quiere poner una marca sobre todos los que le
pertenecen a él. La marca del Anticristo identifica a los que le son leales. En la tribulación,
el Anticristo no permitirá que nadie compre ni venda a menos que tenga la marca de él.
Primero. Algunos tratan de calcular el número. Es decir, intentan descubrir el nombre que
el número representa. La marca es tanto el numero como el nombre de la bestia, Ap.
13:17-18.
29
En el presente usamos números arábigos, el 0 y el 1 al 9. Estos números no se hicieron
populares hasta el siglo decimo. En los días bíblicos las personas no lo utilizaban, sino que
deletreaban los números. Cuando pasó el tiempo, comenzaron a usar las letras del
alfabeto griego para representar los números. El siguiente cuadro muestra las letras de
dicho alfabeto. Al lado de cada letra está el número equivalente. Las primeras cinco letras
del alfabeto griego representaban los números del 1-5.
Letras latinas L A T E I N O S
Valor numérico 30+ 1+ 300+ 5+ 10+ 50+ 70+ 200= 666
Segundo. Esta interpretación es de aplicación más fácil para el día de hoy. Se enfoca en el
contraste entre los números 6 y 7.
Seis es el número del hombre. Dios creó al hombre en el sexto día, Gn. 1:24-31. Dios
mando al hombre que descansara después de cada seis días de trabajo, Ex. 20:9-11. El
permitió que los israelitas plantaran y cosecharan sus campos por seis años, Ex. 23:10-12.
Un hebreo podía ser esclavo sólo por seis años, Ex. 21:2. Por lo tanto seis muestra los
límites del hombre. Seis es siete menos uno y siete es el numero de la perfección o de lo
completo.
Salomón es un ejemplo de lo que el hombre puede hacer. Fue el rey más rico que tuvo
Israel. Un escritor nos dice que Salomón hizo que la plata fuera tan común como las
piedras en Jerusalén, 2 Cr. 9:27. Cada año recibía 666 talentos de oro, 2 Cr. 9:13.
Seis es el digito más alto que Satanás puede alcanzar, pues él nunca puede alcanzar la
perfección que es siete. Por lo tanto, 666 representa fracaso tras fracaso. Su número es la
trinidad de la imperfección.
Armagedón <montaña del degüello>. Es el nombre hebreo del lugar donde los reyes de la
tierra y todas las naciones se reunirán para hacer guerra contra el Señor Jesús en el Gran
Día del Dios Todopoderoso, Ap. 16:16.
Está localizada en la parte central del norte de Palestina, identificada con la montaña de
Meguido; será el centro de la batalla de aquel Gran Día del Dios Todopoderoso. Esta
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batalla ocurrirá hacia el fin de la tribulación, es decir, en los últimos tres años y medio de
la tribulación y concluirá cuando Cristo vuelva para destruir la maldad (cf. 14:19). Para
liberar a su pueblo y para inaugurar el reino mesiánico. Nótese lo siguiente respecto a este
acontecimiento. (1) Los profetas del A.T. profetizaron acerca de él, Dt. 32:43; Jr. 25:31; Jl.
3:2, 9-17; Sof. 3:8; Zac. 14:2-5. (2) Satanás y los demonios juntaran a muchas naciones
bajo la dirección del Anticristo para hacer guerra contra Dios, su ejército y su pueblo, y
para destruir a Jerusalén, vv. 13-14, 16; 17:14; 19:14, 19; Ez. 38 y 39. Aunque el punto
focal será en la tierra de Israel, el acontecimiento de Armagedón incluirá al mundo entero,
Jr. 25:29-38. (3) Cristo volverá e intervendrá de manera sobrenatural para destruir al
Anticristo y sus ejércitos, Ap. 19:19-21; Zac. 14:1-5, y todo al que desobedece el evangelio,
Sal, 110:5; Is. 66:15-16; 2 Ts. 1:7-10. Dios también enviara destrucción y terremoto sobre
el mundo entere en ese tiempo. Vv. 18-19; Jr. 25:29-33.
Esta representa la Babilonia religiosa (hay dos babilonias: la del cap. 17 y la del cap. 18. La
del cap. 17 es Babilonia religiosa que está representada o se refiere al catolicismo romano,
esta será destruida por el anticristo al inicio de la segunda parte de la gran tribulación
cuando el Anticristo elegirá una estatua para que todo el mundo la adore y establezca
una sola religión. La del cap. 18, es la Babilonia comercial que se refiere al sistema
comercial del Anticristo y tiene que ver con el mercado común europeo. Está será
destruida por Cristo en su venida).
En algún momento durante el gobierno del Anticristo, la ramera será odiada por el
Anticristo y sus partidarios y ellos la destruirán totalmente junto con sus instituciones.
Este es el juicio de Dios contra el sistema religioso mundial que rechazó la verdad de Dios
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en Cristo. Esto pudiera ocurrir a la mitad de la tribulación de siete años, cuando la bestia
afirme que es dios y exija que todos la adoren, Ap. 13:8, 15; Dn. 9:27; 11:36-38.
Gog es un nombre simbólico del poderoso y soberbio caudío de las vastas hordas de
Escitia y Tartaria. Magog fue el hijo de Jafet, Gn. 10:2, cuyo descendiente se esparcieron
por las inmensas estepas del norte, dando su nombre a la tierra. Estas hordas,
provenientes del norte <como nublado para cubrir la tierra>, Ez. 38:9, atacaran a Israel en
la tierra de Palestina, pero serán aplastadas por Dios, Ez. 38:18-23; 39:1, 6, 11.
En Ap. 20:8 se vuelve a mencionar a Gog y Magog atacando a Jerusalén, <el campamento
de los santos y la ciudad amada>. Muchos no aceptan la identificación del Gog de Ezequiel
con el de Apocalipsis, estableciendo que en Ezequiel, Gog es visto actuando antes del
milenio, en tanto que en Apocalipsis, Gog actúa después. Otra razón que se da en contra
de la identificación del Gog de Ezequiel con el de Apocalipsis es que en Ezequiel, Gog es
visto viniendo <de los confines del norte>, Ez. 38:6, en tanto que en Apocalipsis, Gog y
Magog son identificados con <las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra>,
Ap. 20:8. Sin embargo, ambos pasajes se pueden conciliar sin dificultades: (1) además de
la mención <confines del norte> en Ez. 38:6, se afirma la coligación de Gog con Persia al
este, Cus (Etiopía, al sur) y Fut (Libia, al oeste) v. 5. Así concuerda con Ap. 20:8 <los cuatro
ángulos de la tierra>. (2) Ez. 38:8 no puede ser conciliado con la época de la tribulación. Se
dan dos alternativas: o bien se trata de un periodo de transición entre la Tribulación y el
Milenio, o bien se trata de Israel morando en la época del Milenio. Una tercera posibilidad
y la más armónica con la característica de la profecía bíblica, es que haya un doble
cumplimiento, antes de la época del Milenio, y un cumplimiento total al término del
Milenio.
La destrucción definitiva de Gog y Magog dará paso final a la instauración del estado
eterno, previo al juicio del Gran Trono Blanco, Ap. 20-22. La guerra de Gog y Magog es la
última rebelión de la historia contra Dios. Es evidente que muchos de las nacidos durante
el milenio optaran por rechazar el señorío visible de Cristo y escogerán en su lugar a
Satanás y su mentira. El juicio de Dios es destrucción total.
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