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- LA DEMOCRACIA COMO ESTILO DE VIDA

EL ESTADO DE DERECHO

A lo largo de la historia han existido muchas formas de Estado, en muchas de ellas

los gobernantes se saltaban las leyes cuando lo creían conveniente y abusaban
impunemente de sus súbditos.

Con el tiempo, se impusieron unos límites que nadie debía traspasar:

* El primero es el que marcan las leyes, ante las cuales todos debemos ser tratados de
la misma manera, incluyendo a quienes están en el gobierno y ejercen el poder.

* El segundo es la existencia de ciertos derechos fundamentales que el Estado debe

respetar en cualquier circunstancia, para lo que están recogidos en la legislación y
ningún gobierno puede actuar ignorándolos.

* Finalmente, es necesario que el poder esté dividido y repartido entre distintas

personas e instituciones para evitar abusos y garantizar que nadie se aprovecha de su
puesto.

Un Estado de derecho es una sociedad en la que se garantiza el imperio de la ley,

se respetan los derechos de las personas y se establece una adecuada separación
de poderes.

Montesquieu y la división de poderes

El concepto de división de poderes se lo debemos al filósofo francés del siglo XVIII

Montesquieu (1689-1755). En su obra Del espíritu de las leyes, nos decía que el
poder político debe dividirse en tres: el poder legislativo (corresponde al Parlamento
y tiene la función de elaborar las leyes), el poder ejecutivo (corresponde al Gobierno
y tiene la función de gobernar de acuerdo con las leyes aprobadas por el Parlamento)
y el poder judicial (corresponde a los Tribunales de Justicia y tiene la función de
sancionar a los que incumplan las leyes).

Estos tres poderes deben estar separados y ser independientes entre sí.
DEMOCRACIA ES PARTICIPACIÓN

Según nuestra Constitución, España es una democracia y un Estado de derecho. Esto

significa que el poder recae en el conjunto de los ciudadanos (soberanía popular) y
que todos somos iguales ante la ley.

Pero la democracia no es algo que se sostenga solo, sino que es tarea de todos
respetar y defender los valores en los que se basa nuestra democracia ( libertad,
justicia, igualdad, solidaridad o pluralismo político).

¿ Cómo podemos participar en la Democracia?

Los ciudadanos podemos:

* Votar en las elecciones. (+18 años)

* Presentarse como candidato en unos elecciones. (+18 años)
* Afiliarse a un partido político, un sindicato o una asociación cívica. (+18 años)
* Asistir a actos y manifestaciones para reivindicar nuestros derechos.
* Informarse y participar en debates públicos sobre cuestiones que nos afectan.
* Colaborar en campañas a favor de los derechos humanos y la democracia.

Hay que distinguir entre la democracia representativa (elegir a nuestros

representantes en elecciones periódicas) y la democracia participativa
( comprometernos activamente a favor de los valores e ideales democráticos).

La verdadera democracia no se limita a permitir que elijamos a nuestros

gobernantes, sino que nos obliga a participar de diversos modos en el gobierno
del Estado.

LA DEMOCRACIA Y SUS RIESGOS

En el siglo XX la democracia se ha ido extendiendo por todo el mundo

constituyéndose como el sistema político más valorado y que mayor aceptación tiene
entre la población.

Sin embargo, la democracia en ningún caso está libre de peligros y defectos.

Necesitamos conocer los riesgos para evitar que esta se debilite o se pervierta,
provocando el retorno de formas de gobierno autoritarias propias del pasado.
Los peligros de la Democracia

Su principal peligro es que se olvide que es un conjunto de valores éticos entre los
que destacan la libertad, la igualdad, la justicia y el respeto mutuo.
La Democracia puede convertirse en una dictadura de la mayoría, es decir, el
gobierno que ha obtenido el apoyo de la mayoría hace que sus decisiones beneficien
sobre todo a una parte de la ciudadanía, sin tener en cuenta los derechos y el bienestar
del resto.

En algunas ocasiones, los partidos políticos prometen aquello que quieren escuchar
los ciudadanos aun sabiendo que no lo van a cumplir, cuando se busca el bien propio
por encima del común hablamos de demagogia.

Los principales riesgos de la democracia son qie se olvide su objetivo de buscar

el bien común u que se pierda de vista el respeto a los valores éticos que la
inspiran.

El desinterés por los asuntos públicos.

El hecho de que en el mundo desarrollado la democracia sea un sistema muy

consolidado, puede llevar a que los ciudadanos pierdan el interés por la política y
dejen de implicarse en ella. Este desinterés puede ser aprovechado por partidos
antidemocráticos, que pretendan instaurar un régimen dictatorial o totalitario, o por
grupos económicos, que pretendan gobernar el Estado como si se tratase de una
empresa que solo aspira a producir beneficios.

La política es algo que nos concierne a todos y debemos asumir el protagonismo que
nos corresponde y hacer oír nuestra voz.