¿Somos realmente libres?

Si miramos en el diccionario la definición de “Libertad” encontraremos que es la

facultad y derecho de las personas para elegir de manera responsable su propia forma
de actuar dentro de una sociedad. También nos dirá que es el estado o la condición en
que se encuentra un individuo, es decir, que no está sometido a las órdenes de otra
persona, coaccionado o encarcelado. La pregunta formulada desde que el hombre
tiene uso de razón a si somos o no libres aún permanece sin una respuesta clara y
concisa. Mientras unos autores opinan que nacemos con este valor innato, otros
entienden que la libertad humana es un puro mito.

Es cierto que sentirse libre forma parte de nuestra naturaleza humana. La esencia de la
libertad existe dentro de nosotros mismos y nadie puede impedir que uno piense o
sienta determinadas cosas. Pero también es cierto que sentirse libre no es lo mismo
que serlo realmente. Si pensamos que la libertad es la facultad que posee todo ser
vivo para llevar a cabo una acción de acuerdo a su propia voluntad, realmente
observando nuestras vidas nos damos cuenta que esta aparente libertad está
sometida a reglas, leyes, principios morales y éticos que varía según las diferentes
culturas. No es lo mismo nacer en España que nacer en cualquier otro lugar del
mundo. Nuestra libertad está delimitada por imposiciones razonables y necesarias (a
veces no tanto), para, supuestamente, garantizar el orden público y social y es que la
libertad absoluta de todos y cada uno de los individuos, sin tener en cuenta el respeto
o voluntad de los demás llevaría inevitablemente al caos y descontrol social. La
libertad no es hacer tu propia voluntad, sino hacer lo que se debe hacer en sociedad,
esto implica unos derechos y conlleva unos deberes, por lo tanto no existe la libertad
sin limite .Algunos creen que son más libres cuando no respetan el derecho de libertad
de los demás o sobrepasan estas normas impuestas, por eso hay conflictos, guerras,
infracciones en nuestro mundo. Esto, más que libertad , es ignorancia que nos acerca a
lo primitivo y al mundo animal.

¿Somos entonces realmente libres? Por el mero hecho de ser personas humanas, si
…..y….. no. La libertad, como el ser humano, tiene límites. Estamos influenciados por
factores externos, como la cultura, leyes y actuaciones de los demás y factores
internos, ideas, pensamientos, impulsos, sentimiento, pero tenemos la libertad de
decidir que queremos hacer con todo ello y que persona queremos llegar a ser.

Cuando lo que debes hacer sea lo que quieres hacer será el momento en el que el
hombre habrá alcanzado su máxima evolución .

Samuel Cortés Yepes 1º BAC A