AGOTAMIENTO - 4 formas de

administrar la energía y dejar de

dar más de lo que obtienes - Rajan
Shankara

Estamos compuestos de una energía eterna que define cómo nos movemos,
hablamos, escuchamos y sentimos.
Pero las personas no son conscientes de su capacidad para aprovechar este pozo
interminable.
Comprender nuestra energía y aprender a administrarla es entender nuestra vida,
mente y ser. Permítanme hacer que este amplio tema sea fácil de aprender para
nosotros con cuatro elementos que nos pueden dar la ventaja en la vida, el amor y
la búsqueda de la felicidad.
Elemento uno: la ecuación energética
Hay un vínculo claro entre la energía y nuestra conciencia. Donde va nuestra
conciencia, fluye nuestra energía. Instagram, correo electrónico, redes sociales:
estos aspectos de la vida pueden compararse con cadenas que nos empujan de
un lado a otro. La razón por la que nos importa es porque el tema de enfoque
llama nuestra atención si lo merece o no.
La ecuación se ve así:
Nuestros sentidos (ojos, oídos, nariz) + Conciencia (enfoque) = Energía
Nuestro enfoque debe ir a nuestro bienestar, el bienestar de aquellos que
amamos, aquellos con los que necesitamos trabajar o que benefician nuestro
futuro de alguna manera. El desafío del manejo de la energía llega cuando
comenzamos a enfocarnos en cosas por hábito, aburrimiento o falta de
disciplina. Incluso nuestros pensamientos pueden ser tan agotadores e
injustificados como las personas o relaciones tóxicas si se dejan indefinidos y
excesivamente aleatorios.
Elemento dos: gasto de energía
Usar energía es inevitable, así es como nos mantenemos vivos, pero lo que no
sabemos es que la mayor parte de nuestra energía se nos escapa sin que lo
sepamos. Sin embargo, si nuestra energía fuera como el dinero, estaríamos
atentos a los pagos automáticos de los pensamientos, las relaciones y la palabra
hablada, todo lo que agota la energía.
La mayoría de las personas no son conscientes de que las cosas más pequeñas
de la vida toman su energía sin devolver nada. El agotamiento es el resultado.
Dar energía debe ser una inversión con un buen retorno. Cuanto mayor sea el
gasto de energía, como las relaciones, mayor será el rendimiento. Las relaciones
fallidas son un buen ejemplo del agotamiento de la energía de un compañero que
lo da todo mientras el otro no da lo suficiente como para mantener el equilibrio.
Asegúrate que cuando le des energía a las personas, situaciones o cosas, puedan
devolverte algo. Es importante que siempre la salida y entrada de energía sea
recíproca para que la cuenta bancaria de energía no se agote. Dar nuestra
energía y no obtener nada a cambio no es sostenible y eventualmente nos dejará
sintiéndonos usados, amargados y resentidos.
Elemento tres: aplicación práctica
Podemos cambiar nuestra perspectiva todo lo que queramos, pero si no
comenzamos a practicar el manejo de la energía, nunca seremos la persona
efectiva, poderosa y espontáneamente creativa que deseamos ser. Usa las "tres
D" para comenzar una práctica firme.
Discriminación + Desapego + Desapasionamiento = Gestión de energía
Discriminación: Tenemos que tener el control consciente de aquello a lo que
prestamos nuestra atención o conciencia. Cultivar la observación para estar
conscientes de las cosas y las personas que nos rodean, pero que no estar
demasiado involucrados. Asegúrate de desarrollar una regla personal: si te estás
involucrando, es mejor que el asunto sea lo suficientemente importante como para
ello. Si no, desprende.
Desapego: la capacidad de liberar la conciencia y, por lo tanto, la energía de un
objeto, situación o persona. Si observamos una situación, persona o cosa que no
necesita nuestro enfoque, entonces la dejamos ir, observamos desde lejos y
esperamos que todo salga bien para los involucrados.
No todo o todos deberían merecer tu atención, porque valoras tu atención, tiempo
y concentración. Si no tratas tu tiempo y concentración como dignos, todos
tratarán de aprovecharse, usarte y no darte nada de energía a cambio.
Desapasionamiento: En este escrito se usa el término como “no apasionarse por
obtener un resultado”. Es la combinación de discriminación y desapego bien
realizada. El desapego es un estado de sabiduría donde la vida se mueve sola
según nuestras necesidades o aversiones. Si no lo necesitamos, entonces
desaparece. Si lo necesitamos, entonces el universo presenta la puerta para que
la abramos. El desapasionamiento nos permite fluir con nuestro universo y dejar
que la ley de la atracción atraiga lo que necesitamos para tener éxito mental, físico
y espiritual.
Elemento cuatro: Cultivar la fuerza de voluntad
El arte de la meditación enfocada nos permite separarnos de aquello de lo que
somos conscientes, jalar todas las cadenas de energía hacia nuestra fuente y
volvernos completos. Con la meditación, podemos comenzar a comprender
las capas de la mente al atravesarlas conscientemente y elegir cómo dirigimos
nuestro enfoque. La meditación es la práctica de dirigir la energía, para poder usar
la fuerza de voluntad y acostumbrarnos a observar la vida sin actuar.
Eventualmente, nos convertimos en un mejor observador, nos volvemos más
conscientes y vemos la vida más claramente.
Todo el proceso de gestión de la energía es parte del arte de la autoestima.
Rajan Shankara

Rajan Shankara dejó el mundo a los 19 años para convertirse en monje y estudiar
su mente, descubrir qué significado y propósito tenía y si la meditación podía llevar
a las personas a estados superiores de conciencia. Después de haber vivido como
monje durante 12 años, ahora está de vuelta en la sociedad como un yogui del
mundo para enseñar a otros cómo controlar su mente, cuerpo y emociones.