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ADMINISTRACION PÚBLICA

Por administración pública se entiende la disciplina y también el ámbito de acción en materia de gestión de
los recursos del Estado, de las empresas públicas y de las instituciones que componen el patrimonio público.
La administración pública se ocupa de gestionar el contacto entre la ciudadanía y el poder público, no
sólo en las instituciones burocráticas del Estado, sino también en las empresas estatales, en los entes de
salud, en las fuerzas armadas, en la policía, los bomberos, el servicio postal y los parques nacionales, entre
otros. En cambio, no abarca los sectores judiciales y legislativos.
Este concepto puede entenderse desde dos puntos de vista:
 Formalmente, se refiere a los organismos públicos que han recibido del poder político las
competencias para atender necesidades puntuales de la ciudadanía en asuntos de interés general,
como la salud, la burocracia, etc.
 Materialmente, se refiere a la actividad administrativa del Estado, es decir, a la gestión de sí mismo,
para reforzar el cumplimiento de las leyes y la satisfacción de las necesidades públicas, así como su
relación con organismos particulares.
La administración pública tiene el privilegio de lo contencioso-administrativo, o sea, del derecho
procesal administrativo, capaz de gestionar actos de gestión (el Estado actúa como persona jurídica) o actos
de autoridad (ejecutados por el Estado por decreto).

Funciones de la administración pública


La administración pública tiene como cometido primordial la gestión de los esfuerzos estatales o de las
diversas empresas e instituciones que componen al Estado, de manera de garantizar el cumplimiento eficaz
de:
 La satisfacción de las necesidades mínimas de la ciudadanía.
 La salvaguarda del orden interno de la nación.
 Garantizar las relaciones burocráticas, jerárquicas e informativas que mantengan un sistema social,
político y ciudadano operando.

3. Ejemplos de administración pública


Algunos ejemplos de administración pública pueden ser:
 Las medidas de recorte y achicamiento del Estado llevados a cabo por los gobiernos neoliberales, en
especial durante la década del 90 en América Latina: despidos de trabajadores públicos, fusión de
ministerios, etc.
 El agrandamiento del Estado que llevaban a cabo los gobiernos socialistas, a medida que expropian
empresas privadas y propiedades que pasan a ser patrimonio del estado, bajo un modelo de gestión
de la administración pública.

4. Administración pública y privada


Aunque muchos de sus procesos puedan ser semejantes, la administración pública y la administración privada
se distinguen en lo siguiente:
 Objetivo. Mientras la administración pública brinda un servicio a la comunidad, la privada persigue
claros fines de lucro.
 Financiamiento. La administración pública depende financieramente del Estado, aunque
dependiendo de su naturaleza pueda prestar ciertos servicios a terceros; mientras que la privada se
debe enteramente a los capitales privados y a las donaciones.
 Legalidad. Ambas son legales, claro, pero la pública está dotada por ley de facultades, mientras que
la privada está vigilada y supervisada por los principios de lo establecido en la ley, y los organismos
públicos se ocupan, entre otras cosas, de garantizar que así sea.
 Dependencia. Mientras la administración pública obedece a los lineamientos del gobierno (siempre y
cuando no contradigan las leyes del Estado), la administración privada conserva un mayor margen
de independencia.

Administración pública y ciencias políticas


El estudio formal de las ciencias políticas suele ir de la mano del de la administración pública, por una
sencilla razón: los diferentes modelos de gobierno o de gestión política que el hombre ha ideado a lo largo de
la historia se han hecho sentir más que nada en el modo de disponer de los bienes y servicios públicos, dado
que un gobierno, desde cierto punto de vista, no es más que una manera específica de emplear al Estado: sus
leyes, sus instituciones y sus cometidos en lo social, cívico y económico.
Características de las auditorías
Aunque como en todo hay excepciones, en primer lugar, la auditoría debe desarrollarse conforme a
las normas de contabilidad que se aceptan por acuerdo de forma generalizada.
Teniendo en cuenta la Ley española, se deberán tener como referencia lo estipulado en la Ley de Sociedades,
el Código de Comercio, el PGC y las normas desarrolladas por Instituto de Contabilidad y Auditoría de
Cuentas.
El auditor emitirá un informe de auditoría capaz de tener efectos a terceros sobre los estados financieros de
la empresa, en función de la investigación realizada a modo de análisis, siguiendo los preceptos antes
descritos.
Además, hay que destacar qué la Ley considera que este tipo de auditorías deberá ser llevado a cabo por
un profesional cualificado que resulta independiente a la empresa sin ningún tipo de interés hacia ella,
y deberá emplear métodos de revisión y verificación apropiados.
Sin embargo, tal y como decíamos en los puntos anteriores, como consecuencia del desarrollo económico
social, la auditoría se ha dividido en distintas clases en función objeto de estudio y las técnicas que vayan a
utilizarse para realizar el análisis.
Para ello encontramos los siguientes tipos de auditoría a modo general.
Clases de auditoría
Dependiendo de lo que se busque examinar y la forma en que se realiza podemos encontrar diferentes tipos
de auditoría entre los que podemos encontrar:

o Auditoría externa o legal: es la más conocida popularmente y consiste en el análisis de las cuentas del
balance anual de una empresa a través de un profesional auditor externo por requerimiento legal. Tiene efecto
de inscripción en el Registro Mercantil.
o Auditoría interna: se lleva a cabo por los propios empleados del negocio, para investigar la validez de los
métodos de operaciones y su coherencia con respecto a la política general de la empresa. Para ello se
evalúan ciertos detalles que intervienen en los procesos y mecanismos internos. Es una herramienta clave
para el control interno y una vez finalizado el análisis emitirá un informe a la dirección o a órganos superiores
del equipo, para evaluar posibles soluciones en referencia a los problemas encontrados.
o Auditoría operacional: este tipo de auditoría se desempeña por un profesional cualificado para ello y tiene
como objetivo valorar la empresa y su gestión para aumentar la eficacia y la eficiencia, hacia una mejora
importante en la productividad. No tiene porqué desarrollarse por alguien interno de la empresa, sino que la
propia Dirección podrá contratar a un profesional especializado en ello. El auditor analizará el sistema y
propondrá ideas con mejoras útiles.
o Auditoría de sistemas o especiales: en este grupo encontramos otro tipo de auditorías dirigidas a evaluar otro
tipo de factores no económicos, como es el caso de la auditoría de software, entre otros muchos.
o Auditoría pública gubernamental: se desarrolla por el Tribunal de Cuentas gracias a las competencias
adquiridas por la Ley Orgánica de 1984.
o Auditoría integral: esta auditoría evalúa por completo toda la información financiera, estructura de la
organización, los sistemas de control interno, cumplimiento de leyes y objetivos empresariales para dar una
visión global y certera del cumplimiento de la empresa.
o Auditoría forense: se realizan en las investigaciones criminales con el objetivo de esclarecer los hechos
ocurridos.
o Auditoría fiscal: esta auditoría se realiza con el objetivo de velar por el cumplimiento de las leyes tributarias,
para que las empresas y organizaciones paguen sus impuestos de forma correcta.
o Auditoría financiera: también denominada auditoría contable. Se encarga de examinar y revisar los estados
financieros y la preparación de informes de acuerdo a normas contables establecidas.
o Auditoría de recursos humanos: se utiliza para hacer una revisión de la plantilla, las necesidades que posee la
empresa y la gestión del talento.
o Auditoría ambiental: se analizan todas las actividades de la empresa para controlar e intentar reducir al
máximo el impacto que poseen el medioambiente.

LA EVOLUCIÓN DEL COMERCIO


En los tiempos antiguos, el comercio se inició como un sistema de trueque, en el que se intercambiaba una
cosa por otra. Los seres humanos prehistóricos hacían trueque de pieles de animales o servicios por
alimentos, por ejemplo. Gradualmente, se estableció el concepto de las monedas. Las sociedades primitivas
utilizaban conchas o perlas como monedas, y en la Mesopotamia y Egipto las barras de oro servían de
monedas, pero había que pesarlas cada vez que se producía un intercambio.
El desarrollo de las monedas de metales, hecho que según estimaciones probablemente se produjo entre los
años 700 y 500 A.C., estandarizó el concepto del valor y simplificó mucho el comercio. Ya fue posible contar
las monedas en lugar de pesarlas, lo cual facilitó las transacciones.
A medida que se comenzaron a fabricar las monedas de oro y plata alrededor del año 500 A.C., el comercio
entre los países se hizo posible, ya que estos metales preciosos tenían un valor estandarizado en todos lados.
Esto permitió que los países con un superávit de ciertos bienes vendieran éstos a otras naciones que los
necesitaban.

Mientras los fundamentos del comercio no han cambiado desde los tiempos prehistóricos, durante el último
siglo se ha producido una gran transformación. En un momento, todo negocio era una pequeña empresa, en
la que los comerciantes vendían artículos a los residentes locales o a otros negocios (imagínate la tienda
general de un pueblo pequeño en los primeros años del siglo 1900). Pero el surgimiento de las grandes
corporaciones llevó al establecimiento de las cadenas de tiendas y los grandes almacenes.

En 1980 nacieron las “supertiendas” – tales como Barnes & Noble o la siempre temida Wal-Mart- Las tiendas
minoristas más pequeñas temblaban con la noticia de que una de estas supertiendas se instalaba en el
pueblo. Con sus masivas economías de escala y precios bajos, las supertiendas o hipermercados obligaron a
muchas tiendas más pequeñas a cerrar sus puertas.

Pero durante 1990, el péndulo comenzó a oscilar de vuelta a favor de las pequeñas minoristas, a medida que
el surgimiento del comercio en línea empezaba a nivelar el campo de juego. Los fundamentos del comercio en
línea se establecieron en 1960 con el desarrollo del protocolo “Intercambio de Datos Electrónicos” (“EDI” de su
sigla en inglés), lo cual posibilitó la transferencia de datos de forma digital desde una computadora a otra.
Pero preocupaciones de seguridad impidieron la adopción de esta herramienta para uso general en las
empresas hasta 1994, cuando Netscape desarrolló la encriptación “Capas de Enchufes Seguras”, llamada
“SSL” por su sigla en inglés. Al mismo tiempo, surgieron los primeros servicios de terceros para el
procesamiento en línea de las tarjetas de crédito, y VeriSign desarrolló los primeros certificados de identidad
digitales para verificar una empresa en la red.

A mediados de 1990, Amazon y eBay cambiaron la cara del comercio electrónico en los Estados Unidos. La
capacidad de buscar libros a base a distintos criterios, de recibir recomendaciones personalizadas y de dejar
críticas de las compras ayudó a la popularización de Amazon entre los consumidores. Mientras tanto, eBay
dio a las personas la posibilidad de abrir sus propias tiendas en línea de manera sencilla y segura.

El colapso de la burbuja digital o de las “punto com” en el 2000 disminuyó el entusiasmo por el comercio en
línea durante un tiempo. Sitios como Pets.com habían apostado demasiado al deseo de los estadounidenses
de comprar todo en línea. Pero el mundo del comercio nunca volvería a ser lo que era antes. En 2004, se
formó el Consejo de Normas de Seguridad para las Tarjetas de Pago (“PCI” por su sigla en inglés) para
asegurar que los negocios en línea cumplieran con los requerimientos de seguridad para las transacciones
financieras. Esta seguridad adicional ayudó a hacer más atractivo comprar en línea incluso para los que
anteriormente le temían.
Según datos de BI Intelligence, un 40% de los hombres entre 18 y 34 años de edad dicen que idealmente les
gustaría comprar todo en línea! Mientras los hombres jóvenes se cuentan entre los compradores en línea más
activos, hoy en día las mujeres, los llamados “Baby Boomers” e incluso las personas de la tercera edad son
activos compradores en línea. La nueva generación de “millennials”, nacida entre los años ’80 y ’90, es la que
gasta la mayor cantidad en línea, tanto en dólares (un promedio de US$ 2.000 al año) como en términos del
porcentaje de sus ingresos (9%). A medida que esta generación joven envejezca, su familiaridad con el
comercio en línea (porque claro, nunca han conocido el tiempo en que no existía) le dará forma al futuro del
comercio.

En 2011, las ventas de los comerciantes que operan exclusivamente en línea, o “e- retailers”, superaron por
primera vez las ventas de las cadenas tradicionales con tiendas físicas, según un reporte de comScore. Esta
brecha siguió profundizándose con las ventas de los e-retailers aumentando mucho más rápidamente que los
sitios web de las tiendas tradicionales. Se espera que las ventas del comercio en línea alcancen más de $ 400
mil millones durante los próximos años: Forrester Research proyecta ventas de US$ 414 mil millones y
eMarketer estima ventas de unos US$ 491,5 mil millones.

Sin embargo, una nueva contra-tendencia ya empieza a ocurrir en la que los vendedores web comienzan a
lanzar tiendas físicas para satisfacer el deseo de los consumidores de ver, probar y tocar los artículos antes
de comprarlos. NastyGal, Warby Parker y Bonobos se cuentan entre los vendedores online que han logrado la
incorporación del comercio físico a su modelo de negocio. De hecho, un estudio de Accenture en 2013
indicaba que un 65% de los compradores en línea planificaban primero investigar los productos en línea y
luego ir a una tienda física para comprarlos. El deseo de evitar los costos del envío (47%) y de poder tocar los
productos (46%) son las razones más comunes de los consumidores para comprar en una tienda física. Por
supuesto, existe también la tendencia contraria. Muchos consumidores visitan las tiendas físicas para tocar y
examinar los productos, y luego buscan los mejores precios en línea.
El mayor cambio que está transformando el comercio en la actualidad es el comercio on line móvil. Según
comScore, en 2014 se produjo un punto de inflexión, y la mayoría de las interacciones con los sitios web del
comercio minorista ahora ocurre en los equipos móviles. Esto no significa que la mayoría de tus clientes ya
están comprando a través de los equipos móviles – todavía – pero sí indica que están investigando, buscando
y comparando precios desde el móvil.

Para llevar tu tienda o sitio web al futuro, es importante optimizar tu sitio web para el uso móvil. Piensa en los
“millennials”: son los consumidores del mañana, pero sus hábitos de hoy influirán en cómo tu sitio web debe
prepararse para el futuro.
LOS ORÍGENES DEL COMERCIO
Los orígenes del comercio se remontan a la época de trueque de la era del Neolítico. El comercio es tan
antiguo como la sociedad y no podríamos concebir esta sin él. Porque basamos toda nuestra vida en este
sistema socioeconómico nos ha parecido interesante hacer un post sobre él.

Y es que ahora la palabra «comercio» es sinónimo de crecimiento, grandes marcas y globalización, pero
hace miles de años era todo muy diferente. En las primeras fases de la humanidad, el hombre para satisfacer
sus necesidades vitales debía agotar todos sus esfuerzos para conseguir unos pocos alimentos. Para
protegerse de la intemperie y mantener alejados a los animales salvajes tuvo que buscar refugio en las
cavernas.

Después apareció el núcleo familiar y la organización social dio sus primeros pasos. Con el crecimiento del
grupo humano y sus formas de vida social, nacían nuevas necesidades de satisfacción humana. Así pues, los
tres pilares básicos eran la alimentación, el vestido y la vivienda. Fue entonces, cuando los orígenes del
comercio comenzaron a dar sus primeros pasos.

Apareció el intercambio de bienes o trueque. Los pueblos ampliaron sus mercados y perfeccionaron sus
sistemas de transporte terrestre y marítimo para legar cada vez más lejos con sus mercancías y traer consigo
nuevos productos desconocidos en la región de origen.

Finalmente se perfeccionó el sistema monetario como medida de cambio, posteriormente al convertirse en


acumulador de riqueza, dio origen a la clase pobre y a la claser rica.

En la actualidad el comercio es una actividad de la economía de los pueblos, destinada a relacionar a los
sectores de producción y consumo, tanto nacional como internacional. La finalidad del comercio está en
satisfacer las necesidades del consumidor y en alcanzar las utilidades económicas para el comerciante.

¿Qué tipos de comercios existen?

Desde los orígenes del comercio hasta la actualidad, se empezaron a desarrollar diferentes tipos de
establecimientos entre los cuales están los siguientes:

1. El comercio mayorista: aquel negocio en el que la mercancía se adquiere y se guarda en grandes


cantidades. El objetivo de este tipo de negocio es vender estos artículos a otra empresa, pero no al
consumidor final.
2. El comercio minorista: empresa que ha adquirido mercancía a un mayorista y la revende al consumidor
final.
3. El establecimiento interior: se lleva a cabo entre individuos que residen en el mismo país y contienen el
mismo derecho en materia comercial.
4. El comercio exterior: es aquel mediante el cual, el intercambio de la mercancía se realiza entre un país,
por ejemplo España, con otros países como por ejemplo Italia, Francia, Reino Unido, etc.
5. El pequeño comercio: dicho de otro modo, es el de toda la vida. Es un negocio familiar que está situado
en cada uno de los barrios. Se realiza por cuenta propia, es decir por sí mismo.
6. El comercio por comisión: es aquel mediante el cual los vendedores se dedican a vender productos que
no son de su propiedad, sino que se lo han encargado en comisión. Por lo que, debido a las operaciones
de venta que realicen estos vendedores, recibirán una comisión de manera previa.

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