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CONDUCTA HUMANA Y BIENESTAR SOCIAL

Technical Report · September 2010


DOI: 10.13140/RG.2.1.4639.8485

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Erick Valencia
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AMERICAN ANDROGOGY UNIVERSITY

MAESTRIA EN HISTORIA DEL ARTE

CONDUCTA HUMANA Y BIENESTAR SOCIAL

ALUMNO: ERICK VALENCIA MERIZALDE

AGOSTO-SEPTIEMBRE 2010
CONDUCTA HUMANA.

Definida como la manera como se comportan los seres humanos. La palabra


conducta puede utilizarse como sinónimo de comportamiento y en este
sentido, la conducta se refiere a las acciones de las personas en relación con
su entorno o con su mundo de estímulos.

El comportamiento de las especies es estudiado por la etiología, que forma


parte tanto de la biología como de la psicología experimental. Para la
psicología, el concepto solo se aplica con relación a aquellos animales que
cuentan con un sistema cognitivo suficientemente complejo. En las ciencias
sociales, por otra parte, la conducta incluye aspectos genéticos, culturales,
sociológicos y económicos, además de los aspectos psicológicos.

Podría decirse que la conducta es el conjunto de comportamientos observables


en una persona. Estos comportamientos pueden ser divididos en 3 áreas:
mente (incluye actividades como pensar, soñar, etc.), cuerpo (comer, hablar) y
mundo externo (concurrir a una cita, hablar con amigos). Una conducta
humana es considerada formal cuando el comportamiento del sujeto respeta
una serie de reglas valiosas en una sociedad o comunidad.

Al comportamiento lo componen una gama de características: la conducta del


ser humano, toda actividad humana que sea observable por otra persona, la
manera de proceder de una persona con relación a la moral o a las reglas
sociales, La forma en que los seres humanos gobiernan sus vidas o dirigen sus
acciones, la forma en que se manifiesta y desarrolla la conducta humana, la
interacción entre estimulo y respuesta, la disposición individual frente a
determinados estímulos que provocan una respuesta según la persona.
El comportamiento precisa una manifestación externa en el mundo o realidad.
El entorno social modifica la respuesta y la persona influye, igualmente, en el
entorno en el que se encuentra y por el que está rodeado. Cuando la persona
sufre un trastorno del comportamiento genera una manifestación de una
conducta inadecuada a la realidad de la persona y del contexto en el que se
produce.

La conducta o el comportamiento del ser humano, al ser una manifestación de


un organismo pensante, de una persona genéticamente estructurada para
hacer una manifestación de actos ante la sociedad y los estímulos, lo hace a
través de cómo este estructurada su personalidad (1). La personalidad es la
que va ha hacer que una persona se comporte de una u otra forma.
La personalidad está compuesta por un conjunto de cualidades físico químicas
que distinguen a un ser de otro y de esa forma el hombre como persona,
además de ser un individuo con un complejo organismo con función sensorio-
motora, es la imagen que da de sí mismo (representación de un papel). La
personalidad es una unidad de elementos que constituyen un sello peculiar o
propio, es la forma de responder ante los estímulos y circunstancias de la vida,
donde se ve como unas cualidades destacan sobre otras, siendo estas las que
caracterizan el sujeto. La personalidad integra el conjunto de de funciones
psíquicas y da como resultado “el comportamiento”, está constituida por aquel
conjunto de elementos físicos, psicológicos, sociales, culturales y espirituales
que muestran un sello peculiar, un estilo propio, una manera de ser, es decir,
un perfil de personalidad.

La personalidad cuenta con varios componentes: rasgos, estructura, núcleo,


etapas, tipos y forma o criterios de definición de esta.

EL ORIGEN DE LA PESONALIDAD

Las características universales de la raza humana y las características


particulares de los individuos se encuentran en el genoma. Algunas personas
son flemáticas, algunas son fuertemente introvertidas. Algunas son ansiosas y
otras encerradas en sí mismas. Algunas son muy extrovertidas y otras son
tímidas. Algunas son calmadas y otras son locuaces. A estas diferencias
algunos científicos lo llaman personalidad, una palabra que significa más que
solo carácter. Esta significa el elemento innato e individual del carácter. Con el
fin de ver los genes que influencian la personalidad es necesario moverse al
interior de las hormonas del cuerpo que afectan la mente. En el brazo corto del
cromosoma 11, yace el gen llamado D4DR. Este es la receta para una proteína
llamada el receptor de la Dopamina.
La presencia de un gen de D4DR activo en una neurona, la identifica
inmediatamente como un miembro de las vías mediadas por dopamina del
cerebro. Una ausencia de dopamina en el cerebro causa una personalidad
indecisa y congelada, aun incapaz de iniciar los propios movimientos del
cuerpo. Un exceso de dopamina en el cerebro, por el contrario, hace a los
ratones de laboratorio altamente aventureros y exploratorios. En el ser humano,
el exceso de dopamina puede causar inmediata de esquizofrenia.
En otras palabras, para simplificar, la dopamina es tal vez el químico de
motivación del cerebro. Demasiado poca, hace que a la persona le falte
iniciativa y motivación. Con demasiadas cantidades, la persona se aburre
fácilmente y frecuentemente está buscando nuevas aventuras. Aquí yace tal
vez la raíz de las diferencias de personalidad.
La primera diferencia genética descubierta en el laboratorio de Richard Ebstein
en Jerusalén fue el gen D4DR en el cromosoma 11. El D4DR tiene una
secuencia de repetición que es variable en el medio, una frase mini satélite de
códigos genéticos de 48 letras de longitud repetidas entre 2 y 11 veces. La
mayoría de las personas tienen entre 4 y 7 copias de la secuencia, pero
algunas personas tienen 2, 3, 5, 6, 8, 9, 10 o 11. Entre más largo sea el número
de repeticiones, mas inefectivo es el receptor de la dopamina para la captura
de esta. Un gen D4DR largo implica una baja respuesta a la dopamina en
ciertas partes del cerebro, mientras que un gen D4DR corto implica una alta
respuesta.
Las personas con bien una o dos copias largas del gen (se debe recordar que
hay dos copias en cada cromosoma en cada célula del cuerpo adulto, uno de
cada padre) habrá en forma más diferente personas buscadoras de novedades
que las personas con 2 copias cortas del gen. Las personas que les gusta lo
novedoso son muy posiblemente poseedores de una o más copias del gen
largo. La diferencia genética puede contribuir a las diferencias de personalidad.
Personas con genes largos de D4DR tienen baja respuesta a la dopamina, por
lo tanto ellos necesitan estar sometidos a mas aventuras para vivir que lo que
necesitan aquellos con concentraciones de dopamina bajas, o sea aquellas
personas que gustan de cosas simples. En investigación de estos niveles de
dopamina se desarrollan las personalidades innovadoras.
Entre hombre heterosexuales, aquellos con un gen largo de D4DR son seis
veces más probable que tengan tendencia a dormir con otro hombre que
aquellos con genes cortos. Entre los hombres homosexuales, aquellos con
genes largos tienen 5 veces más probabilidad de dormir con una mujer que
aquellos con genes cortos. En ambos grupos, las personas con genes largos
tuvieron más compañeros sexuales que las personas con genes cortos.
Se estima que los buscadores de aventuras son transmisibles genéticamente
en el 40% y que hay cerca de 10 genes igualmente importantes, cuyas
variaciones aparean la variación de personalidad. Haciendo una presunción de
que todos estos genes pueden estar involucrados en forma similar, se llega a la
conclusión de que hay cerca de 500 genes que pueden variar en mayor o
menos penetrancia con variaciones de la personalidad. Esta es la realidad de
los genes del comportamiento. Se tendría que chequear los 500 genes uno por
uno, decidiendo en cada caso, rechazando el gen anormal.
Mientras que el descubrimiento de la personalidad tiene un fuerte componente
genético, este puede ser usado por algunos para terapias no genéticas.
Cuando a monos bebes tímidos se les somete a madres monos confiadas en sí
mismas, los monos bebes cambian su timidez. De tal forma que unos padres
de características adecuadas puede alterar una personalidad innata.
Jerome Kagan, un psicólogo de Harvard, maneja un grupo de investigación de
niños tímidos y seguros, el encontró que se pueden identificar tipos inhibidos
en una edad tan temprana como 4 meses de edad. 14 años más tarde podría
predecir que tan tímido y seguro seria el ser humano a la edad adulta.
Adolescente jóvenes tenían en mayor probabilidad ojos azules (todos los
sujetos fueron descendientes europeos), fueron susceptibles a alergias, altos y
delgados, cara estrecha, tenían más actividades generadoras de energía y mas
pulsaciones mas rápidas que los individuos tímidos. Todas estas
características están bajo el control de un grupo de células particulares en el
embrión llamadas células de la cresta neural; de las cuales parten órganos
particulares como el cerebro y la amígdala hipocampica. Ellos usan el mismo
neurotransmisor, llamado norepinefrina, una sustancia similar a la dopamina.
Todas estas características son encontradas en el norte de Europa, países
nórdicos. Los argumentos de Kagan son que la era de hielo selecciono a
aquellas personas capaces de permanecer en el frio en esos lugares: personas
con metabolismo alto.
Si una persona presenta niveles usualmente altos de serotonina en el cerebro
será una persona compulsiva, tierno, cauteloso, hasta el punto de ser
neurótico. Las personas con condiciones patológicas conocidas como desorden
obsesivo-compulsivo pueden aliviar sus síntomas a través de la disminución de
los niveles de serotonina. En el otro lado del espectro, las personas que tienen
niveles usualmente bajos de serotonina en sus cerebros tienden a ser
impulsivos. Son aquellos que cometen crímenes violentos impulsivos o
suicidios. El medicamento Prozac inhibe la reabsorción de serotonina por parte
de las neuronas, incrementando las concentraciones de serotonina en el
cerebro. El incremento en la serotonina alivia la ansiedad y la depresión y
cambia el estado de ánimo de la persona a alguien más optimista. Esta seria la
forma farmacéutica de modificar las personalidades. De todo esto se deriva que
la serotonina es el químico que influye sobre el cerebro, lo alivia, lo pone
ansioso o lo deprime. Es llamado el químico castigador del cerebro. De igual
forma, los niveles de serotonina pueden ser modificados por esquemas
alimenticios; el consumir carbohidratos estimula la secreción de insulina, esta
ultima favorece la absorción de sustancias a la célula que compiten con la
entrada de triptófano a la célula, así que al no entrar triptófano este se
incrementa en la sangre que pasa por cerebro, de esa forma se aumentan las
concentraciones de triptófano en el cerebro. Del triptófano se produce la
serotonina y de esta la melatonina, hormona encargada de inducción de sueño.
Esta sería una de las explicaciones de porque el ingerir carbohidratos induce
mayor estado de somnolencia.
Por lo tanto, bajos niveles de serotonina es un predictor exacto de agresividad
en monos y un predictor exacto de seres humanos con características como
peleadores, suicidas, impulsivos y seres humanos asesinos. Hay pocas dudas
que el estado de ánimo y la personalidad es afectado por los niveles de
serotonia. El cambio en la química del cerebro permitirá que alguien llegue a
ser un criminal, afectado por la química de su cerebro.
El humor, la mente, la personalidad y el comportamiento son socialmente
determinados, pero esto no significa que no sean biológicamente
determinados. Las influencias sociales afectan el comportamiento a través de
la activación y desactivación de genes. Los comportamientos sociales no son
una serie de eventos externos que toman por sorpresa al cuerpo y la mente.
Estos son parte innata del maquillaje externo y nuestros genes están
programados no solo para producir comportamientos sociales sino también
para responder a estos (1).

CONDUCTA ALTRUISTA – CONDUCTA PROSOCIAL.

El estudio de la conducta pro-social comienza con el trabajo de Rossenthal


(1998) (2). El 13 de marzo de 1964 la joven trabajadora Kitty Genovese fue
asesinada al lado de su residencia en la ciudad de Nueva York. Un crimen del
observable a diario y de la rutina diaria si no fuera por el hecho de demorarse
30 minutos para que se desarrollase. Kitty gritaba y pedía ayuda, mientras se
movía apuñalada de una puerta a la otra, y el asesino volvía una y otra vez
hasta que la violó y le dio el golpe homicida. El homicidio era observado por 35
vecinos a través de los ventanales y después de haber culminado la labor del
asesino todos los espectadores continuaron su vida normal: ver TV, escuchar
radio, dormir, etc. Los gritos, llamados de auxilio y demás exclamaciones de
ayuda nunca fueron contestadas por nadie.

Porque el ser humano algunas veces ayuda y porque otras veces no, ¿Por qué
sucede esto? (3). Si una embarazada en el pleno parque Berrio de la ciudad de
Medellín, presenta un cuadro de lipotimia o mareo con pérdida del
conocimiento, en pocos segundos se encuentra en el piso. La sociedad
continua como si no hubiera sucedido nada, de nuevo, ¿Por qué? Podrían
haber pasado 5 o 10 personas y su única expresión era una mirada de refilón,
no se puede mirara de frente a esta persona porque eso los compromete
demasiado y podría hacer que su propio subconsciente le pregunte: ¿Por qué
no me detengo? Así lo gritemos a 5 vientos !somos personas amables¡ no
somos pro-sociales ante la sociedad. Cuando una persona con algún rasgo
genético diferente decide parar a observar que sucede, logra identificar que
siendo una materna del diario común presentaba una diabetes gestacional que
obligaba a recibir alimentos 6 veces al día. Esa era su causa y la forma de
recuperarla no exigía más que sentarla bien y brindarle una bebida con algo de
carbohidratos. Con esta conducta, su esposo pudo llegar a auxiliarla al
momento de terminar una de sus inagotables colas en entidades bancarias,
atenciones que no son para personas en estados de gravidez.

Bibb Latané y Jhon Darley (1970) consideran que cuando una persona es
testigo de una situación de emergencia, llevar a cabo una conducta de ayuda
depende de una serie de decisiones. El contexto donde se produce una
emergencia influye en la interpretación que se hace la misma. Las personas
tienden a interpretar las situaciones de tal manera que no requiera su
intervención o ayuda. La decisión de intervenir en una situación de emergencia
viene determinada por la percepción de la persona, esto es, que se perciba
como una verdadera emergencia. No obstante, esta es una condición
necesaria pero no suficiente, además de percibir la situación como verdadera
emergencia, deberemos considerar que es nuestra la responsabilidad de
ayudar. Esta decisión de asumir la responsabilidad viene determinada por el
número de testigos que se hayan presentes, a medida que aumentan los
testigos disminuye la percepción de responsabilidad (difusión de la
responsabilidad o efecto espectador) (4). A la luz de la cultura
latinoamericana, la decisión de ayudar solo podría aparecer en la intensión del
otro siempre y cuando su propia vulnerabilidad no se vaya a ver afectada. En
ese momento, hay propiedad por la conservación de su propia vida que la del
que requería la ayuda. De esta forma es manifiestos que la unión en el SNC
entre la decisión altruista y las manifestaciones de un gen egoísta son bastante
cercas o de interacción biológica. El egoísmo puede bloquear el
comportamiento pro-social o altruista.

Para algunos autores esa inhibición de la ayuda por el comportamiento egoísta


ha sido denominado como el modelo de los costos de ayuda, Piliavin y Rodin
(1969) (5). La respuesta hacia un evento de ayuda puede ser de 3 tipos: 1)
mediante intervención directa, 2) Interpretar que la situación ya no requiere
ayuda y 3) abandonar la escena e ignorar la situación. Cualquiera de estos
comportamientos depende del costo que para el testigo representa y el costo
para la víctima. El primero de ellos, pueden ser costos físicos (el agresor o la
situación están por encima de sus posibilidades) o psicológicos (la víctima no
está en peligro). Con respecto al segundo, la intervención de un testigo para
salvar a una persona del ataque de una pandilla no incrementara
sustancialmente el peligro pero puede salvar a la víctima. Sin embargo, la
ayuda parece depender del grado de activación del sujeto, los sujetos con
mayor nivel de activación psicológica fueron los que emplearon menos tiempo
en prestar ayuda (6).
El modelo de costos de ayuda considera 3 factores: la empatía, la excitación
psicológica y el costo. Con respecto a la empatía se considera que intervienen
las siguientes variables: a) las características de la situación: ambigüedad de la
situación y numero de sujetos, b) características del testigo: edad, genero y
capacidad de ayuda, c) características de la víctima: genero, grupo racial y
atractivo, d) parentesco familiar: la totalidad probabilidad de ayudar a nuestros
hijos incluso en situaciones de riesgo o costo extremo.
En este ir desenvolviendo como se produce la conducta altruista, nos surge
otra pregunta, ¿hombres y mujeres se comportan igual en situaciones de
emergencia o en las que hay que prestar ayuda?. Algunos datos indican que
los hombres prestan más ayuda que las mujeres (6). Sin embargo son las
mujeres las que desempeñan con más frecuencia profesiones dedicadas a la
ayuda de los demás como enfermería o trabajo social. Asimismo existe mayor
probabilidad de que las mujeres hagan más favores que los hombres y brinden
más apoyo a sus amistades. Las mujeres detectan mejor las solicitudes de
ayuda no verbal implícita, Los hombres prestan más ayuda de tipo técnico, la
ayuda de las mujeres es de tipo emocional y personal (7). Las características
físicas determinan el tipo de ayuda que se presta, los hombres están en
mejores condiciones de prestar ayudar cuando ésta requiere de fuerza o
intimidación.
La ayuda del ser humano puede clasificarse según sus diferentes situaciones y
basado en los diferentes componentes de este: 1) Situaciones de
recompensa: las personas que son reforzadas en una situación previa de
ayuda son más proclives a prestar ayuda posteriormente En este contexto se
sitúa el fenómeno de la codependencia, los niños que aprenden a ganarse la
aprobación y la autoestima satisfaciendo las exigencias de un padre
dependiente y disfuncional buscarán las oportunidades de ayudar a las
personas parecidas en el futuro. 2) El estado de humor: las personas que
están de buen humor tienden ayudar más que aquellas que no lo están.
Aunque se ha podido comprobar que no siempre el buen humor conduce a
prestar más ayuda. Si las personas se sienten felices por la buena fortuna de
otro, no se produce un incremento en el número de conductas de ofrecimiento
de ayuda. Pero si está de mal humor por algún suceso acaecido, ofrece menos
conductas de ayuda, sin embargo, si su estado de ánimo negativo se debe a lo
sucedido a una tercera persona si brindará ayuda. 3) Situación de modelado.
La probabilidad de prestar ayuda aumenta si hay un modelo llevando a cabo
una conducta de ayuda. 4) Situaciones de apremio: quien no tiene prisa se
detiene y ayuda. Quien tiene prisa es más probable que pase de largo. 5)
Atribución de altruismo: Aquel que se considera altruista tiene más
probabilidad de llevar a cabo conductas de ayuda. 6) Por norma: En este
punto debemos de considerar dos principios, la norma de responsabilidad
social y la norma de reciprocidad. Según esta última tendemos a ayudar a
quienes nos ayudan y no dañamos a los que no nos dañan; de esta norma
están exentos los viejos, los muy jóvenes, los débiles y los enfermos.
El bienestar social no solo depende de quién lo ofrece, son las formas de
expresión de la personalidad lo que también influye como respuesta al acto de
ayuda. Esto ha llevado a clasificar a los individuos que reciben ayuda en varios
grupos: 1) Personas que nos agradan: Las personas ofrecen su ayuda no a
todas las personas por igual. Los amigos ayudan más rápidamente que los que
no lo son. 2) Personas semejantes: No existe discriminación racial cuando es
evidente que una persona necesita ayuda, no obstante, si la situación de
emergencia es ambigua, los testigos, dependerán de la semejanza racial para
determinar quién recibirá la conducta de ayuda. 3) Personas que lo merecen:
Menos de la mitad de las personas están dispuestos a ayudar a una mujer a
pagar un paquete de galletas, frente a dos terceras partes que ayudaron a
pagar un litro de leche, esto hace que la actitud de ayuda esta mas dirigida al
tipo de producto con el que se desea ayudar que a la victima racial (8).
En última instancia se ayuda a alguien a su bienestar social por un sentimiento
que se genera ante la otra persona. Lo que sentimos cuando vemos a alguien
en necesidad no es angustia sino tristeza. Experimentamos tristeza y queremos
reducir ese sentimiento y elevar nuestro estado de ánimo. Ayudar a quien lo
necesita mitiga esa tristeza, no ofrecer ayuda no mitiga ese sentimiento. Este
giro en la conceptualización revela que ayudamos a otros con el fin de manejar
nuestro estado de ánimo (9).

BIENESTAR SOCIAL Y POLITICO

Podría ser entendido como forma de intervención del estado en la sociedad


civil. En un sentido sociales de una sociedad. Los orígenes de las políticas
sociales se remontan a las últimas décadas del siglo XIX en Europa, donde
nacen con el objetivo de moralizar la economía liberal, a fin de evitar las
injustas consecuencias sociales de la Revolución Industrial. En sus inicios, la
política social ‘anglosajona’ se preocupó fundamentalmente por todas aquellas
personas amenazadas por la pobreza: ancianos, vagabundos, enfermos, etc.
La política social ‘latina’, en cambio, se interesó por las condiciones de la clase
trabajadora, identificándose con la política laboral: prohibición del trabajo a los
menores de edad, reducción de la jornada laboral, salarios más justos,
seguridad en el trabajo, etc. Con el tiempo, las políticas sociales han ido
transformándose y ampliando su radio de acción no sólo a las capas más
necesitadas de la población, sino a la mayoría de los individuos que componen
una sociedad.
Relacionadas con la provisión de servicios sociales, las políticas sociales
forman parte del Estado de bienestar, su representación institucional, y abarcan
una extensa gama de programas sociales, como políticas de salud, seguridad
social, vivienda, educación u ocio. Hoy su objetivo es la búsqueda del bienestar
y la mejoría de las condiciones materiales de vida de la población.
Que se puede llamar servicio social: En un sentido amplio, es la prestación de
servicios sanitarios y educativos, la protección social del trabajo y la vivienda,
los seguros y subsidios de renta y la asistencia social individual. En un sentido
restringido, los servicios sociales son actividades técnicas organizadas por las
administraciones públicas y enmarcadas dentro de las políticas de bienestar
social. Su objetivo es la prevención, rehabilitación o asistencia de individuos, de
familias o de grupos sociales con amplias carencias y demandas, en pro de la
igualdad de oportunidades, la realización personal, la integración social y la
solidaridad. La finalidad global de los servicios sociales es la satisfacción de
determinadas necesidades humanas dentro de una comunidad.
Los servicios sociales cubren, en general, los siguientes sectores de población:
mujer, familia y menores, juventud, tercera edad, minusválidos, toxicómanos,
delincuentes y reclusos, minorías étnicas, emigrantes y personas en situación
de pobreza y marginalidad. La familia ha sido la principal fuente de asistencia y
provisión de servicios a lo largo de toda la historia de la humanidad. Sin
embargo, siempre existió la polémica sobre la entidad que debía
responsabilizarse a nivel supra-familiar: el Estado, la Iglesia o la administración
local. La caridad y la beneficencia pública son prácticas fundamentales de la
sociedad medieval, en la que existía una red de gobierno local más organizada
y compleja que en el Imperio romano, más centralizado, aunque el
florecimiento de los Estados (desde pequeños principados a amplias
jurisdicciones) ya dejaba entrever el auge del Estado de bienestar de la era
moderna.
En las sociedades occidentales con derechos sociales amplios, donde impera
el Estado de bienestar, el mantenimiento de los servicios sociales también
provoca fuertes controversias. El porcentaje habitual de la renta nacional
invertido en servicios sociales por los países económicamente más avanzados
es del 30 %. Sin embargo, actualmente algunos gobiernos están interesados
en reducir sus gastos sociales para que la comunidad libere al Estado de gran
parte de las cargas de asistencia social y servicios sociales, pero hay que tener
presente que estas medidas implican no reconocer estos servicios como
derechos inalienables de los ciudadanos.
Por otro lado, expertos en el tema han demostrado que la inversión en
bienestar social va unida al progreso económico, ya que los países que
mantienen altos gastos sociales tienen asimismo un rápido crecimiento
económico. En consecuencia, el gasto social, más que constituir la causa de
una crisis económica, forma parte de su solución (10).

CONCLUSION.

Cada ser humano viene estructurado biológicamente para poder


desempeñarse de determinada forma ante estímulos del medio externo. Esta
estructura orgánica la dan la plantilla genética. La forma en que la sociedad
active o desactive esa plantilla biológica será la forma en que cada persona
aprenderá a comportarse en el medio y esto formara la personalidad que se
expresa ante el medio externo y que es mostrada a través del comportamiento.
De estas interacciones bio-psico-sociales parten los comportamientos
altruistas, egoístas y de envidia. La forma en que cada gobierno o tendencia
política actúa hacia el benéfico social depende de lo que predomine en el
comportamiento de los pensadores políticos. El avance científico permitirá que
bien sea fármacos e interacciones genéticas, que permitirán modificar
comportamientos agresivos, violentos, criminales y antisociales; para un mayor
bienestar social del ser humano.

BIBLIOGRAFIA.

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2. Rosenthal, S., Feiring, C. & Lewis M. Political volunteering from late
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Lensey and Jason Madzuma. Helping Hands: A study of Altruistic
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10. Homero Cuevas. Proceso Politico y Binestar Social. Universidad
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