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(MINIS TRN, INIAN INFINIAN,
-

CAUSAS
CELEBRES

HISTORICAS ESPAÑOLAS,
POR

EL ExCMO. SEÑOR CONDE DE FABRAQUER,

Ex-MINISTRo DE Los TRIBUNALES sUPREMOS DE GUERRA Y MARINA, or DENES, y CRUZADA,

ANTIGUo MINISTRO DEL CONSEJo DE CASTILLA, ETC., ETC.

MADRID, 1858.

ESTABLECIMIENTO TIPOGRAFICO DE D. F. Di; P. MELLADO,


calle de Santa Teresa, núm. 8.
-
IIIII, VIIII, SEÑOR MIR ), TIMAS DEL CORRAL Y NA,
MARQués DE sAN GREGoRIo, vizcoNDE DE oÑA, CABALLERo GRAN CRUZ DE LA REAL
óRDEN AMERICANA DE IsABEL LA cÁróLICA, COMENDADOR DE NúMERO DE LA DE
cáRLos III, y orRAs vARIAs, coNSEJERo DE INSTRUCCION PÚBLICA, RECTOR
DE LA UNIVERSIDAD cENTRAL, PRIMER Médico DE CAMARA DE s. M. LA REINA,
ETC., ETC., ETC.

He concluido un libro histórico y te lo dedico.


Cuántas veces en los quince años que cuenta nuestra íntima amis
tad, ora sentados cerca del lecho de mi muger ó de mis hijos, cuando has
venido á darles la salud, ora en mi despacho rodeados de libros, cuando
buscabas distraccion á tus contínuos estudios y trabajos tan útiles á la
humanidad, nos hemos ocupado en departir sobre muchos puntos de la
historia de nuestro pais, tan varia, tan pintoresca, tan romántica!!!
Al escribir una coleccion de causas célebres, verdaderos dramas que
tienen por actores y víctimas á los reyes y principales personages y por
espectadores no solo al pueblo que los presenció sino á los hijos de este
¿ los leerán hoy con asombro, he querido consagrar á la amistad este
trabajo.
Para esto no he buscado escritos ficticios que ayudasen el trabajo de
la imaginacion, sino los anales de muestra historia: he registrado los ma
nuscritos mas selectos de la Biblioteca Real y de la Academia de la His
toria y he procurado representar fielmente los sucesos.
Nada en este libro es invencion: he seguido escrupulosamente la his
toria en sus anales, y los sentimientos los he sacado de los escritos mis
mos de los personages que retrato. Los documentos son inéditos, origina
les, y los he trasladado íntegramente para poder conservar mejor el in
terés y dejarles el sabor y el sello de la época.
Asi en la causa de don Alvaro de Luna, verás que el asesinato era
entonces un medio de gobierno; y recorrerás tambien el reinado de don
Juan II, que fué una série de conspiraciones y de guerras civiles. Rey
débil, dominado por su favorito don Alvaro, justificó éste la confianza de
su monarca haciendo respetar la dignidad real, tan largo tiempo hacia
envilecida, apoderándose con audacia de la espada de Condestable arran
cada á uno de los gefes de las facciones vencidas, que empuña con mano
firme y valerosa; y las victorias de Figueras y Guadix hacen estremecer
en sus cimientos el trono de los árabes de Granada. Pero tambien verás
que los enemigos de don Alvaro escitan la codicia de don Juan II, y que
éste débil monarca para apoderarse de las riquezas de su favorito, entregó
al verdugo de Valladolid, sin mas que una sombra de formas jurídicas,
la cabeza del ministro que durante cuarenta y cinco años habia llevado
sobre sus hombros el peso de la dignidad real.
Despues al hablar de la célebre causa de don Antonio Acuña, obispo
de Zamora, tendrás que tender la vista sobre el estado de España en
aquella época, agitada por las Comunidades en demanda de su libertad y
sus santos fueros: verás su pérdida en Villalar, y ensangrentada la vic
toria haciendo servir la espada de la justicia para los rencores y la ven
ganza.
Mas adelante, en el reinado de Felipe II, observarás una causa que
en vano cerca de tres siglos despues se ha intentado reproducir casi por
idénticos pretestos, la causa del príncipe de Asturias, don Cárlos de
Austria.
Al leer la causa de Antonio Perez, célebre ministro de Felipe II,
instrumento de su política, confidente de sus planes, rival de sus amores,
observarás como las cosas mas agenas á la política, como las mas livia
nas pasiones influyen en la suerte de los pueblos: asistirás á la pérdida
de los fueros de Aragon y á los padecimientos de un hombre á quien al
mismo tiempo odia el rey y le consulta en toda su política.
Al hablar de un falso rey, don Sebastian, cuyo papel intentó repre
sentar apoyado en una asombrosa semejanza, en circunstancias estraordi
marias y en el amor de algunos portugueses deseosos de recobrar la inde
pendencia de su pais, un oscuro pastelero de la villa de Madrigal, tendrás
que recorrer rápidamente el gran suceso de la incorporacion de Portugal
á, España, que aseguró por tanto tiempo la preponderancia de nuestra na
cion en Europa.
En los castillos de Simancas y de Torrejon de Velasco, encontrarás
sangrientas huellas de la tenebrosa y pérfida jurisprudencia de Felipe II.
Verás una terrible prueba de la inconstancia de la fortuna, en el trá
gico suceso de don Rodrigo Calderon, conde de la Oliva, marqués de
Siete Iglesias y ministro de Felipe III, que en el apogeo de su poder es
encerrado por mucho tiempo en una prision, y últimamente, faltando á
todas las reglas de la justicia, sirvió de espectáculo su suplicio al adveni
miento de un nuevo reinado.
Lee, distráete un rato con este libro que te dedico como una prueba
de mi cariño, como el testamento de mi amistad.
Dá alguna vez al hojearlo un recuerdo al hombre que hace quince
años, cuando estabas aun muy lejos de los honores y alta posicion á que
te llamaba tu mérito, estrechó con la mayor simpatía tu mano y fué desde
entonces tu mejor amigo y admirador.
Madrid, 28 de Noviembre de 1858.
El CoNDE DE FABRAQUER.


-
llMy
HISTORICAS ESPAÑOLAS.

D0N ALVARO DE LUNA.

(1453.)

El trágico fin de don Alvaro de Luna la inocente Blanca de Borbon, su es


es una terrible leccion para los ambi posa, para arrojarse en los brazos de la
ciosos, un ejemplo admirable de la in hermosa María Padilla; hace dar muer
constancia de los reyes, un funesto es te á tres de sus hermanos, presencian
pejo del paradero de los favoritos que do él mismo la de don Fadrique; man
OS.
pre medran á espensas de los pue da degollar alevemente al rey de Gra
nada ¿ que se acoge á su hos
Al hablar de la causa de don Alvaro pitalidad, y hace espirar bajo el puñal
de Luna, mas que de un proceso, tene de sus verdugos al maestre de Cala
mos que ocuparnos de un asesinato ju trava y á otros personages de los mas
rídico. distinguidos. Enrique de Trastamara
El asesinato era en los siglos XIII con su propia mano asesina á su her
y XIV un medio de gobierno. Asi la his mano y á su rey.
toria nos presenta á muchos reyes va Su reinado da un respiro á Castilla,
liéndose de él para dirigir la goberna fatigada por tantas guerras civiles. Los
cion del Estado: y apenas las historias reinados sucesivos de Juan I y Enri
y las crónicas de aquellos tiempos ha que III, no son tan pacíficos, en parti
llan una , palabra de vituperio contra cular el de este último que comenzó
estas acciones, cuando no se constitu por una menoría.
yen en sus ¿ iristas. De un año sube despues al trono
Asi Sancho IVasesina á don Lope de Juan lI. Su reinado es una serie de
Haro en el palacio mismo de Valladolid; conspiraciones y guerras civiles; em
Alonso XI hace sufrir igual suerte á su pero en este reinado se presenta una
primo el infante don Juan el Tuerto, á figura colosal, la de don Alvaro de Lu
quien atrae con engaño á su córte y hace na. Aquel rey débil hizo de él su fa
asesinar sentado á su propia mesa. Pe vorito, y se dejó dominar por él en
dro I, el Cruel, comienza su reinado ha teramente. Don Alvaro justifica la con
ciendo asesinar á la manceba de su pa fianza del monarca, haciendo respe
dre, doña Leonor de Guzman; sacrifica tar la dignidad real tan largo tiempo
TOMO I. 4
2 CAUSAS (CIELEBRES.

envilecida. El, desde simple page del Habia llegado á tanto el valimiento
monarca niño, se eleva á las mas altas de don Alvaro, que habiendo quedado
dignidades á fuerza de méritos; se apo viudo don Juan II por la muerte de su
dera con audacia de la espada de con esposa, la reina doña María, valido de
destable arrancada á uno de los gefes la amistad particular que tenia con el
de las facciones vencidas; la empuña regente de Portugal, duque de Coim
con mano firme y valerosa, y las vic bra, negoció por su cuenta, aun sin
torias de Figuera y de Guadix hacen dar el menor conocimiento de ello al
estremecer en sus cimientos el trono
mismo rey, su matrimonio con la infan
de los árabes de Granada. Este hom ta doña Isabel, hija del infante don Juan
bre estraordinario lucha durante cuade Portugal. Creia sin duda don Alva
renta y cinco años, no solo con los ro de Luna que elevando él al trono de
grandes de Castilla rebelados, sino con Castilla á aquella princesa, y debiéndole
todo el poder de los reyes de Aragon y esta toda su fortuna y engrandecimien
de Navarra, á quienes veremos fre to, siquiera por gratitud le profesaria
cuentemente coligados para derribarle el mismo amor que le tenia el rey su
del favor en que le habia constituido esposo. Incurrió en el desagrado del
Juan II. Cuarenta y cinco años duró es— rey don Juan II por haber tíatado este
ta lucha; empero, escitada la codicia negocio sin darle parte ni solicitado su
de don Juan para apoderarse de las ri consentimiento, porque él queria sen
quezas que el condestable habia alle tar en el trono de Castilla á la hija pri
gado en el largo período de su fortuna, mogénita del rey de Francia; empero
entrega al verdugo en Valladolid la ca aquel rey débil no tuvo ni el valor nece
beza del ministro, sobre cuyos hom sario para oponerse á una determinacion
bros habia descansado por tanto tiem que tan de cerca le tocaba, y en que
po todo el peso de la dignidad real. aventuraba su felicidad, porno quebran
Ante don Alvaro se inclinaban los tar la voluntad del con destalble. Prestó
mas principales magnates de la córte, su aprobacion al enlace, y la princesa
las grandes dignidades del Estado se portuguesa subió al tronó de Castilla. La
hallaban ocupadas por sus hechuras. reina fué la que mas trabajó en el áni
Pero encontró, como todos los hombres mo de don Juan II para separarle de
que disponen del poder, ingratos, y la amistad que profesaba á don Alvaro
de estos traidores se valieron sus ene— de Luna, y la reina fué poderosamente
migos para perderle y dar al mundo el secundada en esta empresa de perdi
ejemplo mas prodigioso de la incons cion por don Alonso Perez de Vivero,
tancia de la fortuna. que fué uno de sus mas señalados fa
Habia recibido el de Luna en su voritos.
servicio á un Alfonso Perez, natural Veia don Alvaro, amaestrado por
de Vivero, de oscuro linage, á quien las luchas que por tanto tiempo habia
protegió hasta el punto de darle el se tenido que sostener, que comenzaba á
ñorío de su patria, cuyo nombre aña eclipsarse el brillo de" refulgente lu
dió á su apellido, concediéndole otras na, que era el emblema de sus armas,
villas y castillos, elevándole á con y trató de deshacerse de su principal
tador mayor del reino, el primero des enemigo Vivero, no sin haber intenta
pues de él en el consejo del rey, y do antes apartarle de sus propósitos y
uno de sus ministros, colmándole de traerle á buen camino. Leia el favorito
riquezas. Siempre á su lado y en su en el rostro de don Juan II que iba di
casa, habia conquistado su aprecio y sipándose su favor; pero fiado en las
confianza, para los negocios. Alfonso diversas veces que se habia visto en
Perez habia sido testigo de muchos mayores conflictos y los habia supera
actos del amor que el rey tenia á don do, disimuló, é hizo llamar á su estan
Alvaro, y ambicioso de su poder y va cia á Alfonso de Vivero en presencia
limiento resolvió hacerle la guerra y de Fernando de Rivadeneira, que era
se unió á sus enemigos, comenzando uno de sus criados mas fieles, y le dijo:
con tal insistencia y tal arte su propó —Alfonso Perez, Alfonso Perez de
sito, que logró enemistar al rey y al Vivero, mucho me maravilla que cual
príncipe de Asturias con el condestable. perro bermejo se me haya vuelto la
DON ALVARO DE LUNA. 3

voluntad del rey mi señor desde no del verdugo en Valladolid á los pocos
hace mucho tiempo á esta parte. Voto dias de la conferencia del favorito del
hago á la santa casa de Jerusalen y á rey, don Alvaro, con el favorito de la
esta cruz que en los pechos tengo, que reina, don Alfonso Perez de Vivero.
yo sé de cierto quién es el que con su
señoría me ha puesto en mal, y le he A la muerte de Enrique III, fué pro
de dar tal pena que en este mundo le clamado rey su hijo don Juan II, cuan
sea el debido castigo, y á los demas do solo tenia catorce meses de edad.
escarmiento y ejemplo. Su padre habia dejado por regentes á
Al oir Alfonso Perez de Vivero las dos de los mas poderosos señores del
palabras que el condestable habia pro reino; pero las córtes eligieron á la
nunciado con reconcentrado furor, y reina madre y al infante don Fernan
conociendo el carácter altivo del de do, su tio (1407).
Luna, que no acostumbraba á decir pa Hizo el regente con mucho suceso
labras en valde, le temblaron las pier la guerra contra los moros de Grana
nas, é hincándose de rodillas ante el da, y las escuadras de Castilla batie
maestre, le dijo: ron á las de Tunez y Tremecen, im
—Señor, nunca á Dios plazca que yo pidiendo desembarcar sus gentes en
haya sido, ni sea, en cosa alguna de lo España.
que vuestra merced dice; antes, se Pusieron los moros sitió á Alcaude
ñor, estad seguro de que entre tantos te, y los sitiados se defendieron con
criados como vuestra merced tiene, nin tanto denuedo y valor, que les hicie—
guno le ha servido como yo, en espe ron levantar el sitio con gran pérdida.
cial por conservarle en la voluntad del Se renovó la tregua con los moros,
rey, por cuantas artes y modos he po que solo duró un año, y comenzó con
¿? y plegue á Dios Nuestro Señor el mayor calor la guerra (1410). Llevó
que dé á su merced lugar, tiempo y vo sus armas vencedoras por dó quiera el
luntad de hacerme aquellas mercedes infante don Fernando, y se apoderó de
que yo por esto he merecido y merezco. Antequera, á pesar de cuantos esfuer
Entonces el maestre no le habló ya zos hicieron los moros para socorrerla.
mas; solo le dijo: La ciudad fué tomada por asalto y ca
—Agora bien, Alfonso Perez, por las pituló la ciudadela, y esta accion tuvo
obras se conocerá. tanta celebridad en su época, que sir
Alfonso Perez de Vivero le con testó: vió de renombre al infante, á quien
—Asi ruego á Dios Nuestro Señor llamó la historia don Fernando el de
que muestre por milagro cuales son mis Antequera.
hechos. La generosa conducta del infante
Medió Fernando de Rivadeneira di don Fernando, que varias veces se ne
ciendo al maestre que se dejase de mas gó á las tentadoras proposiciones de
hablar, y que creyese lo que Alfonso ceñirse la corona de Castilla, á que le
Perez le decia, y entonces comenzaron invitaban los mismos grandes, y que
á tratar de otras cosas distintas. Reti se contentó con ser el guardador activo
róse Alfonso de Vivero humillado como del niño que descansaba en la régia
todos los traidores, y aumentado en el cuna, hizo que a la muerte del rey de
corazon su odio. Fuése á concertar con Aragon, don Martin, los compromisa
la reina la perdicion de don Alvaro, y rios de aquel reino, reunidos en Alca
acelerar su propia muerte, que debia ñiz para elegir soberano entre los que
de ser la señal de la terrible esplosion alegaban derechos á la corona de Ara
de la ira de don Juan, contra el amigo gon, y cuyo órgano fué San Vicente
de su niñez, contra el favorito de toda Ferrer, se decidiesen por él y le eleva
su vida. Pasaba esto en Burgos en los senal trono de aquella monarquía (1412).
primeros dias de la Semana Santa del Cuatro años solamente ocupa el tro
año 1 453. no el infante don Fernando; pero á su
Para la inteligencia de estos sucesos muerte (1416), queda regente única la
necesitamos recorrer brevísimamente reina madre de Castilla doña Catalina,
la vida del protagonista del sangriento la que nombra algunos señores que la
drama que debia desenlazar la cuchilla sirven de consejo.
4 CAUSAS CELEBRES.

Ya en tiempo de su regencia, y al ro el rey quedó con una mortal pesa


lado del rey niño don Juan II, empeza dumbre. Fué tanto el dolor, y tantas
ba á privar otro jóven don Alvaro de las lágrimas que derramó por su au
Luna, el personage que mas influjo sencia don Juan II, que no hubo mas
debia de ejercer en todo aquel reinado. remedio que hacer que volviese inme
Era don Alvaro hijo de un noble diatamente al lado del rey el jóven fa
señor, don Alvaro de Luna, señor de vorito. Tornó, pues, con las apremian
Cañete y de Jubera, copero mayor del tes instancias que le dirigia la reina in
rey don Enrique. Habia nacido de una mediatamente don Alvaro á Valladolid;
muger de oscura y humilde esfera, y al ver que cada dia iba en aumento
de costumbres livianas, llamada María su favor todos procuraron complacerle,
de Urazandi, que antes habia tenido ya servirle, y ponerse bien con él. Augu
un hijo del alcaide de Cañete Cerezue res los cortesanos del semblante del
la, y á quien por apodo llamaban Ma monarca leian en él la elevacion futura
ría la Cañeta. Don Alvaro habia venido del jóven favorito.
por primera vez á Castilla en 1408, en Don Alvaro era galante, y apasio
compañía de su tio don Pedro de Lu nado en estremo de las mugeres, y su
na, que era arzobispo de Toledo nom galantería unida á sus gracias persona
brado por el papa Benedicto XIII, de la les le hicieron el ídolo de las damas de
ilustre familia los Lunas. Aquel pre palacio.
lado lo presentó á Gomez Carrillo de Privaba entonces con la reina doña
Cuenca, ayo del rey niño, y prendado Catalina, y era la que dirigia casi to
éste de la apostura galana y gracias del dos los negocios del reino, doña Inés
niño, don Alvaro lo dejó con él, y en— de Torres, la que se enamoró perdida
tró de page en la cámara real. Se afi mente de don Alvaro. No queria el jó—
cionó tanto el rey á su nuevo page que ven doncel corresponder al amor de
no sabia separarse de su lado. Esperi aquella dama, la que atribuia su des
mentó el cariño que le tenia el monar— den á hallarse enamorado de doña Cons
ca, ejerciendo el mayor ascendiente en tanza Barba, otra de las damas de pa
todas sus acciones, porque con solo su lacio; y habiendo escitado al mismo
presencia desterraba la melancolía á tiempo los celos de don Juan Alvarez
que era muy inclinado el niño rey; y Osorio que obsequiaba á doña Inés, y
la reina doña Catalina, que deseaba que compartia con ella el poder y la
complacer en todo á su hijo, y que veiainfluencia cerca de la reina, trató esta
el grande amor que tenia al niño Al de casarle de sorpresa, para lo que le
varo, le hizo su maestre de sala. Con citó un dia á su cámara; empero ha
ojo envidioso vieron los cortesanos el biendo oido desde ella la conversacion
rápido vuelo que en el favor iba toman que en una de las estancias interiores
do don Alvaro, preludio de lo que ha tenia la reina con doña Constanza Bar
bia de ser un dia mas adelante. ba, y la madre de ésta, se salió inme
Era don Alvaro aunque pequeño de diatamente de la cámara huyó por
cuerpo de muy apuesta figura, vestia que decia que él no tenia la suficiente
elegantemente, cabalgaba muy bien, fortuna para poder contraer matrimo
tenia mucha gracia en el decir, y pe— nio en aquel entonces. A esta fuga de
netracion grandísima, hacia muy lin don Alvaro entristecióse de nuevo el
das trovas, y era muy aficionado á los rey: suplicó y rogó tanto que la reina
poetas. doña Catalina perdonó el desaire que
En 1415, se concertó el matrimo— le habia hecho; lo hizo volver á pala
nio de la infanta doña María, hermana cio, y desde entonces don Juan HI, no
del rey don Juan, con el príncipe don se dejó servir de ningun otro mas que
Alfonso, rey de Aragon, é hijo de don de él.
Fernando su tio. Aprestóse una lucida En la mañana del 1.º de junio
comitiva para acompañar á la infanta de 1418, amaneció muerta en su cama
á Navarra, uno de los designados y la reina madre doña Catalina. Enton
ya con el objeto de separarle del lado ces algunos señores intrigaron para que
del rey, fué don Alvaro. el rey don Juan II fuese proclamado
Marchó el jóven don Alvaro, empe rey, aunque no tenia sino trece años.
D0N ALVARO DE LUNA. 5

El 20 de octubre se desposó en Medina rida que recibiera en las justas de Ma


del Campo con la infanta doña María, drid, marchó á Segovia donde se ha
hija del rey don Fernando de Aragon, llaba el rey, y obtuvo del monarca la
que habia sido su tutor. Desde alli mar facultad de acostarse á los pies de su
charon á Madrid; y el 7 de marzo del cama, una de las señales de distincion
año siguiente 1419, declaró en las cór mas marcadas de aquella época.
tes celebradas en Madrid que queria Deshizo la formidable liga que se iba
ya gobernar por sí solo. formando contra el rey, mandande á
Celebróse la toma de posesion del unos señores á sus castillos, fundado en
reino con grandes fiestas, torneos y que no debia haber tantos grandes en la
justas, las que no se terminaron por la córte; á los menos temibles los colocó
grave herida que en ellas recibió don en el consejo del rey; y al infante don
Alvaro. El airoso y apuesto doncel, Juan lo casó con la reina de Navarra
despues de haber puesto muchas lan doña Blanca, haciendo salir desterrade
las, á pesar de haberle mandado el rey de la córte á don Enrique. Este fué el
que se retirase, le pidió licencia para alarde primero que hizo de su influen
una carrera mas con Gonzalo Cuadros, cia, habiendo creado tambien trescien
un famoso justador y puntero. Hizo tos hombres de armas de su casa entre
saltar á éste de la silla, quebrando la los que brillaban cuatro señores, y
lanza; pero quedó maltratado por él muchos nobles é hijos de grandes que
en la cabeza, corriendo su vida grave solicitaron militar bajo su estandarte.
riesgo , salvándose al fin, pero ha En 1420 se casó con doña Elvira,
biendo tenido que sacarle mas de vein hija de don Martin Fernandez Porto
te y cuatro astillas de huesos. carrero, de quien no tuvo sucesion.
Todos los dias lo visitó el rey cons Habiendo ido el infante don Juan á
tantemente, y á imitacion del monar— Navarra á ver á la infanta doña Blan
ca hicieron lo mismo los grandes. Ce ca, heredera de aquel reino, con quien
lebráronse por su salud grandes roga tenia tratado su matrimonio, su her
tivas: hiciéronse ayunos: multiplicá mano don Enrique que veia libre el
ronse promesas. campo para llevará efecto su proyec
Ya en el ejercicio del poder don to de apoderarse del rey, cayó de im
Juan II, antes de cumplir los catorce proviso sobre Tordesillas en la madru
años, formó un consejo para concordar gada del 14 de julio de 1420, y forzan
las pretensiones opuestas de los gran do con sus parciales las puertas del pa
des, de quince prelados y caballeros, lacio cuya guarda era escasa y descui
ue debian relevarse alternativamente dada, llegó á donde dormia el rey y á
e cinco en cinco cada cuatro meses. sus pies ¿ Alvaro de Luna.
Don Alvaro continuó en la privanza —Buena gente, les dijo don Alvaro,
del monarca, que se dejaba gobernar con la sorpresa algun tanto sobrecogi
por don Juan Hurtado de Mendoza, ma do, ¿tan de mañana á dónde? ¿Se os ha
yordomo mayor del rey, casado con olvidado, infante, la reverencia que á
una prima de don Alvaro, llamada do los reyes es debida, cuanto mas á nues
ña María de Luna. tro rey y señor natural?... ¿Cuál pen
Los infantes de Aragon, hijos del samiento fué aquel que vos fizo acome
rey don Fernando, don Juan y don En ter tan feov desmesurado atrevimiento?
rique, habian recibido grandes here— Animado el rey reprendió al infan
damientos en Castilla. Unidos al rey te, y éste le dijo:
por los vínculos de la sangre, como —Señor, don Alvaro de Luna que
primos carnales, de mas edad y espe remos que sea cerca de vos, que es
riencia, trataban de hacer pesar sobre virtuoso y bueno, é ama vuestro servi
el inesperto y débil jóven toda su in cio; mas algunos de los otros apartad
fluencia. Aunque ambos hermanos ca los de vos.
minaban á un mismo fin, eran rivales Don Juan Hurtado de Mendoza fué
y cada cual tenia su partido. Todo cogido durmiendo en compañía de su
anunciaba una serie de perturbaciones esposa doña María de Luna, y preso por
y discordias en Castilla. las tropas del infante con otros oficia
Restablecido don Alvaro de la he les de la casa del rey.
6 CAUSAS CELEBRES.

Apenas se difundió la noticia del de don Alvaro. Oyó éste el toque de


atentado, aprestáronse las gentes de rebato; hizo que el rey marchase ade
don Alvaro, aunque cortas en número, lante, y se quedó él á pie firme para
y encontraron á las de don Enrique pelear y dar tiempo á que pudiese ve—
mandadas por el conde de Benavente rificar su fuga el rey. Pasa el Tajo con
y el arzobispo de Sevilla. En tal con bastantes apuros, y logra refugiarse en
flicto, y á punto ya de venir á las ma el castillo de Montalvan, que á toda
nos, don Alvaro se presta á presentar prisa repara; Al dia siguiente se pre
se con el infante para aplacar á unos y senta el infante don Enrique con su
á otros. Las fuerzas de don Alvaro eran gente; lo cerca, y lo estrecha, faltán
menores, y creyó prudente esperarlo ¿ los víveres hasta el estremo de
todo del tiempo: mandó á los suyos verse reducidos á comer la carne de
que se estuviesen quietos, que no se los caballos. Habló varias veces con
habia de remediar aquello por aquel don Alvaro, y quedó en que se retira
modo; que el rey lo remediaria y cas rian al Espinar; que el rey lo verifica
tigaria cuando fuese tiempo: y á la má ria á Segovia, nombrándose igual nú
gica influencia de su palabra cedieron mero de caballeros que reunidos deci
todos. El rey quedó verdaderamente diesen la cuestion, y que las tropas de
prisionero de don Enrique, y fué lle don Juan, que de Navarra venian á
vado á Avila, donde el 4 de agosto se marchas forzadas para libertar al rey,
verificó el concertado matrimonio con se retirarian á Santa María de Nieva.
doña María, hermana del infante; y en Puesto el rey en libertad, despues
las córtes de Avila justificó y aprobó de veinte y tres dias que duró el asedio
todo lo que don Enrique habia hecho, de Montalvan, mandó al infante don
por un efecto de su celo, y para librar— Juan que despidiese sus tropas y sa
le de la tiranía de Juan Hurtado, y ha liese de la córte, porque tampoco que
cer cesar las grandes injusticias que se ria vivir en su poder, sino estar ente
cometian con gran perjuicio de la co ramente independiente. Don Enrique
I'OIld. se le rebeló, y el rey revocó la dona
Desde Avila llevó don Enrique al cion que habia hecho del ducado de
¿ á Talavera, donde al fin logró el Villena, con todos los pueblos de su
infante uno de sus principales deseos, distrito. La mayor parte de estos pue
que era casarse con su prima la infan blos siguieron el partido del rey, y
ta doña Catalina, hermana del rey; en abandonaron al rebelde infante.
lace que maravilló á todos, porque la Agradecido el rey á tantos y tan
infanta no le queria, pero que se veri eminentes servicios como le habia
ficó porque acomodaba á los planes y prestado don Alvaro de Luna, le dió la
proyectos futuros de don Alvaro de villa castillo de Santisteban, si bien
Luna. El rey dió en dote á su herma con alguna repugnancia de la reina, á
na el marquesado de Villena, con una quien correspondia, esta villa, con
porcion de castillos y lugares, conce acuerdo unánime del consejo, y des
diendo ademas al infante su esposo el pues la villa de Aillon. Hubiérale dado
título de duque. mas mercedes el monarca de Castilla,
Casado don Enrique se distrae un si él mismo no se hubiera opuesto á
poco de la perenne vigilancia que te que se le hiciesen.
nia sobre el rey. Este, deseoso de sa El infante don Enrique continuaba
lir del cautiverio en que estaba, y todavía armado y no queria ceder á las
guiado por don Alvaro de Luna, á la órdenes del rey de licenciar su ejérci
hora del amanecer del 29 de noviem to. Asi es que se mantenia en Ocaña
bre sale con los halconeros á caballo, en la misma actitud guerrera. En vista
aparentando ir de caza, y acompañado de tan obstinada desobediencia, man
de algunos y decididos parientes del dó el rey secuestrar las villas de que
de Luna, como en otras ocasiones acos habia tomado posesion, haciendo vol
tumbraba á hacer. Esta cacería, que ver el marquesado de Villena á la co
encubre su fuga, es sabida pocas horas rona. Llegaron las cosas á tal punto,
despues por don Enrique, el cual sale que el rey volvió á llamar á su lado al
con su gente en persecucion del rey y infante don Juan, y entonces, al ver
D0N ALVAlè0 DE LUNA. 7

aquel que iba á servirse de la fuerza El rey de Castilla hacia á su cuña


para obligarle á obedecer, vino á verle do Alfonso V de Aragon apremiantes
á Madrid acompañado de don García reclamaciones para que le entregase la
Manrique, su amigo, que quiso espo— infanta doña Catalina su hermana, y
nerse á todos los peligros y que era el los castellanos que se habian refugiado
que le aconsejaba en sus rebeliones. en sus Estados. Al mismo tiempo el
El 13 de junio se presentó don Enri rey de Aragon reclamaba que pusiese
que en el palacio de Madrid como ha en libertad á su hermano don Enrique,
bia ofrecido, besó respetuosamente la y no habiendo querido ceder mútua
mano del rey don Juan, y empezó á mente, se prepararon para la guerra.
hablarle de sus negocios; empero el En 1425 nació el príncipe de Astu
rey no le quiso oir y le mandó que se rias don Enrique, de quien quiso el rey
retirase á su estancia, manifestándole don Juan II que su valido y favorito don
que al dia siguiente le daria audiencia, Alvaro de Luna fuese su padrino. A
como efectivamente se la dió estando los ocho dias fué reconocido y jurado
acompañado de todos los grandes y se por príncipe heredero.
ñores dc la córte. En su presencia fué Levantában se tropas en Castilla pa
acusado de haber sido autor de unas ra la defensa del reino en el caso de
cartas que habia escrito el condesta ser atacado, y en Aragon se apresta
ble Rui Lope Dávalos al rey de Grana ban tambien á la guerra; empero am
da para escitarle á hacer la guerra al bos príncipes en su corazon querian la
de Castilla. Inútiles fueron los esfuer paz y evitar venir á las manos. Sabia
zos que hizo para disculparse don En bien el de Castilla que la mayor parte
rique; él y don García de Manrique de los señores aborrecian á su favorito
fueron presos, confiscados todos sus y deseaban una ocasion para manifes
bienes, º y villas, repartidas las tar su resentimiento. El de Aragon se
plazas y el dinero del condestable Rui hallaba en circunstancias en que no le
Lope Dávalos, que indudablemente hu convenia verse embarazado con esta
biera sido preso á no haberse refugia guerra, y mandó al infante don Juan,
do en la ciudad de Valencia, acogién su hermano, que se hallaba en Casti
dóse al amparo del rey de Aragon, y lla, siempre al lado del rey, que vol
acompañado de la infanta doña Catali viese á Aragon. Dolíale á este tener que
na, esposa de don Enrique. tomar parte por uno de los dos sobe
Formada causa al condestable al ranos; pero don Juan II le permitió vol
año ºde 1 423, fué sentenciado verse á Aragon, y le dió plenos pode
á perder el cargo de condestable de res para poder arreglar la paz. -

Castila y á la confiscacion de sus in Apenas habia llegado al campo de


mensos bienes, que fueron distribui don Alfonso, recibió la noticia de que
dos entre el infante don Juan y otros habia muerto el 6 de setiembre el buen
varios señores de Castilla. rey de Navarra Cárlos el Noble. La su
Vacante la dignidad de condestable cesion de aquel reino recaia en la in
por la destitucion de Dávalos, don Juan fanta doña Blanca, su esposa; asi es
dió la espada de éste á don Alvaro de ue en Navarra y en el real de Aragon
Luna. Envió éste á visitar á Dávalos ¿ se hallaba fué proclamado rey.
que se hallaba proscripto y miserable Don Alvaro, con numerosas y luci
en Valencia; y respondió á su enviado: das fuerzas, salió á recibir á los reyes
—Decid a señor don Alvaro que de Aragon y de Navarra en Palenzue
cual es fuimos y cuál somos, será. la, donde oyó á los embajadores que á
Profecía que tuvo su terrible cum él le dirigian. Rehusó las villas con que
plimiento! le brindaban por la libertad de don
La investidura de condestable la Enrique, negándose á admitir nada que
celebró en Tordesillas con danzas, tor no viniese de las manos de su rey; pe
neos y lucidísimas fiestas, en que hizo ro se comprometió á interponer todo
gala do Alvaro de Luna de una es— su valimiento para conseguir esta li
plendidez superior á la de los reyes de bertad, como lo verificó muy en bre
aquella época, haciendo magníficos re ve, á pesar de la repugnancia de don
galos á los justadores. Juan II, como tambien la restitucion
8 CAUSAS CELEBRES.

de todos sus bienes. Tanta era la in mente preso en el castillo de Uceda.


fluencia, tanto era el valor que se da A pesar de la sentencia de los ár—
ba á la palabra de don Alvaro, que su bitros, don Juan II le rogó que perma
sola respuesta bastó para evitar las neciese á su lado; pero el condestable,
hostilidades. firme en su respeto al pacto, se fué á
Poco tiempo duró esta paz por los la villa de Aillon; mas acompañado de
celos que tenian los grandes contra tantos caballeros, que mas parecia que
don Alvaro. El rey de Castilla para la córte entera se trasladaba alli, que
contentar al de Aragon, hizo trasladar no un ministro depuesto y desterrado.
á la frontera al conde de Urgel encer Vivia en Aillon el condestable, mas
rándole en un castillo; pero el arago como un soberan o que como un pros
nés halló medio de sacarlo de allí y lle cripto, y mantenia por medio de acti
varle al castillo de Játiva, donde estu vos y celosos agentes una correspon
vo cautivo por toda su vida. dencia continua con el rey de Castilla
Comenzaba en 1427 á florecer el don Juan II.
reino, regido mas bien por don Alvaro Desterrado don Alvaro, quedó en
que por el indolente don Juan II, mas favor que nunca el infante don
cuando ingrato el infante don Enrique Enrique. Los señores y los grandes se
con don Alvaro, puesto de acuerdo con dividieron entonces entre sí, cometien
los caballeros y grandes que llevaban á do mil violencias los unos contra los
mal la privanza del de Luna,, y no po otros, y tales desórdenes produjeron
dian ver en él la superioridad y el mé las ambiciones de los dos infantes don
rito, acorde tambien con el rey de Na Juan y don Enrique, tales desafueros
varra, que hallaba en el celo del de cometian los suyos, º se alzó un cla
Luna un obstáculo perenne á sus de mor general en todo el reino, y los
mandas contínuas de ciudades, villas mismos infantes don Juan y don Enri
y tierras otorgadas por el débil monar que suplicaron que se tornase á llamar
ca, pero que rehusaba con teson un á la córte á don Alvaro, é igual súpli
hombre de gobierno y del temple co ca dirigieron los arzobispos, los prela
mo don Alvaro, vinieron ambos sobre dos, los grandes y el consejo del rey.
Valladolid con un ejército, hallándose Jamás se habia mostrado una opinion
el rey en Simancas. tan unánime, tan compacta y tan im
Ardia el reino en bandos y discor— ponente.
dias, cuando don Alvaro hizo abortar Escribió entonces el rey á don Al
la guerra civil, pues que tratándose varo llamándole, y este hábil hombre
solo al parecer de su persona, no qui de estado negóse por tres veces á vol
so que esta fuese causa de la ruina del ver á la córte. Contestaba don Alvaro
reino, y trató de retirarse. Don Juan II que bastaban al rey para darle conse
consultó con un fraile franciscano, lla jo el rey de Navarra, el infante don
mado fray Francisco de Soria, lo que Enrique y los demas grandes que tenia
habia de hacerse en aquel conflicto, y á su lado, y que él le serviria desde su
por su consejo determinó que se falla tierra en todo cuanto le pidiese. Vol
se el asunto por cuatro jueces árbitros. vió á insistir el rey, y entonces exigió
Reuniéronse estos en el monasterio de el hábil favorito que don Enrique, el
San Benito de Valladolid, y pronuncia rey de Navarra y los demas grandes ju
ron sentencia de que el condestable rasen la necesidad y utilidad de su
don Alvaro de Luna saliese en el tér— vuelta. Uno á uno prestaron el jura
mino de tres dias de Simancas, donde mento ante el rey, y entonces el as
se hallaba instalado, por año y medio tuto condestable se mostró resignado á
á quince leguas de distancia de la cór— cumplir lo que él mismo tanto de
te: asi como las gentes que habia colo seaba.
cado al lado del rey. Dos á dos, nom Acompañado de sus caballeros, don
brados por cada parte, eran los jueces; celes, pages, y una tropa lucidísima
empero vendió á don Alvaro don Fer levantada á su costa, tornó á la córte,
nan Alfonso de Robles, que todo se de donde salieron á recibirle don En
lo debia, y que mas adelante espió rique, su hermano, los grandes todos,
sus malas artes muriendo miserable que á porfia le rodeaban y solicitaban
D0N ALVARO DE LUNA. 9

su favor, tardando muchas horas en lle El rey se presentó con sus tropas
gar al palacio donde le aguardaba el delante de la plaza de Alburquerque,
mismo rey, y que al verle se levantó y ofreció amnistía á los infantes si se
de su silla y se arrojó en sus brazos. rendian (1430); pero estos, desprecian
El infante don Enrique, don Juan, do su clemencia, hicieron disparar con—
rey de Navarra, hicieron despues los tra él, con cuyo motivo los declaró re
mayores esfuerzos para ganarle á su beldes y confiscó todos sus bienes, re
partido; pero don Alvaro de Luna tuvo partiéndolos entre los principales se
la ¿ algun tiempo despues de ñores. Don Alvaro de Luna, que habia
separarlos á los dos de la córte con salvado la vida al rey en este sitio, es—
pretestos honoríficos, arreglando el ne poniéndose personalmente, no quiso re
gocio de la dote de la infanta doña Ca cibir nada de estos despojos.
talina, esposa del rey de Navarra, que Comenzóse á negociar la paz, y al
era el pretesto que tenia éste para es cabo se concluyó una tregua con los
tar ausente de su reino, y revolver reyes de Aragon y Navarra, porque los
continuamente el de Castilla. moros de Granada se habian puesto en
Cuando los enemigos de don Alvaro movimiento.
vieron que su favor se aumentaba to Firmada esta tregua, el condes
dos los dias, se conjuraron de nuevo table de Castilla, don Alvaro de Lu
para derribarle, siendo los principales na, hizo ¿ el rey aprovechase aque
el infante don Enrique y el rey de Na llos grandes armamentos para entrar
varra, por el resentimiento de haber en campaña contra los moros de Gra
sido engañados. El rey de Aragon jun nada. Reunió el ejército y acometió al
tó tropas para sostenerlos en su em rey de Granada, que se hallaba solo
peño, y todo se hallaba ya próximo á con sus fuerzas, no habiendo querido
un rompimiento. llevarle socorros el rey de Tunez. Los
Ibase ya á dar la batalla en las fron moros fueron batidos por todas partes,
teras de Aragon entre el condestable llegando las tropas castellanas hasta la
don Alvaro de Luna, que habia salido vista misma de su capital.
al encuentro del rey de Navarra y del Habiendo enviudado don Alvaro se
de Aragon, cuando el cardenal Foix, casó en 1431 con doña Juana Pimentel,
legado del papa, se presentó recorrien hija del conde de Benavente, y esta
do las filas de ambos campos con un poderosa alianza, unida al esplendor
crucifijo en la mano, exhortando á la que él ya tenia por sí mismo, le hizo
paz. Al mismo tiempo, la reina doña ser el señor mas grande y poderoso de
María, muger de don Juan II y herma Castilla.
na de los reyes de Navarra y Aragon, No pudiendo el ejército cristiano to
habia marchado presurosa al sitio de mar á Granada, retó inútilmente don
la batalla, habia hecho asentar una tien Alvaro á su enemigo, siguiendo luego
da entre los dos campos, y habló con á Loja, Archidona y otros puntos, com
tanto interés á unos y á otros, que gra batiendo siempre y talando el campo.
cias á su celo los reyes de Aragon y de Mostró don Alvaro gran presencia
Navarra se retiraron, y el condestable de ánimo al paso del Genil, cuya cre
alzó tambien sus tiendas, no retirán cida hizo peligroso el vado mientras lo
dose, empero, hasta que los reyes tor atravesaban los cristianos, siendo ne—
naron á sus tierras. cesario todo su valor y autoridad, todo
En este tiempo habia el rey juntado su influjo y ejemplo para que no per—
sus gentes y tomado el castillo de Pe diesen ánimo los de una orilla á vista
ñafiel, donde se habia declarado en re ya del enemigo, ni se arredrasen y
belion el conde de Castro y el infante rehusasen vadear el rio los que aun
don Pedro, hermano de don Enrique, permanecian en la otra.
que sin noticias del tratado entre don Tal alarma causó en el pais el paso
Álvaro y los reyes declaró la guerra, de este rio, que los sarracenos, due—
llevando un heraldo con un cartel de ños de él, huian despavoridos, inutili
desafío, que no se aceptó, y siguió á zando en su fuga cuantos víveres y
Aragon con cien mil infantes y doce efectos no podian llevarse. A esta falta
mil caballos. de víveres debió atribuirse el no ha
()
TOM0 l. -
() CAUSAS CELEBRES.

ber verificado don Alvaro su acertado El conde de Palencia, el conde de


plan de caer sobre Málaga, y tambien Haro y otros señores formaron una
á una insurreccion de un cuerpo de conspiracion contra don Alvaro en los
vizcainos que llevaba en sus huestes. momentos mismos en que ganaba la fa
Los reprimió y los hizo pasar á cuchi mosa batalla de Sierra de Elvira. A se
llo para dar un ejemplo de severa dis guirse el dictámen del condestable hu
ciplina al ejército en aquellos tiempos bieran caido sobre la ciudad de Grana
de tan frecuentes revueltas y rebe da, y no se hubiera demorado el tre
liones. molar la cruz de Cristo sobre las torres
Siempre marchando al frente del de la Alhambra hasta el reinado de Isa
ejército, llegó á sentar sus reales á la bel la Católica.
vista misma de la Alhambra. Continúan las agitaciones en Casti
Despues de algunos dias de fre lla, y los magnates que conspiraron
cuentes escaramuzas, salieron á lidiar contra don Alvaro en el campo mismo
los moros en número de doscientos de Sierra Elvira, fueron presos por el
mil infantes y cuatro mil caballos. Se rey en Zamora al saber que andaban
habian reconcentrado en Granada to en nuevos tratos con los reyes de Ara
das las fuerzas de aquel reino. Los prin gon y Navarra y con los infantes sus
cipales capitanes ds Castilla y los obis hermanos; pero el generoso condes
pos propusieron al verse en número table de Castilla ruega por ellos, y son
menor la retirada. Don Alvaro fué de inmediatamente puestos en libertad.
opinion contraria, y el rey, siempre Apenas habia terminado la guerra
dócil á su parecer, adoptó su opinion de Granada, cuando empiezan de nuc
y se dispuso á la batalla. vo las turbaciones de Castilla, escita
Recorre don Alvaro las filas de los das por los grandes y principales seño
castellanos, los habla con calor y da res, especialmente por don Juan de So
órden á todos para que avancen y le tomayor, gran maestre de Alcántara,
sigan. Era el dia 24 de junio. Entonces el conde de Castro, los que se ha
se vió una cosa singular, tal cual no ha ian unido con los infantes don Enri
vuelto á repetirse en ninguna accion que y don Pedro; pero el rey con el
de guerra, y que pudo haber costado condestable tomaron tan bien sus me
caro al reino de Castilla. Batíanse en didas, que sin derramar sangre alguna
un ala del ejército, en vez de batir al los infantes volvieron á la obediencia
enemigo, los condes de Niebla y de Le por la mediacion del rey de Portugal.
desma, que se odiaban implacablemen Las córtes que se celebraron en Ma
te. Alli corrió don Alvaro; interpúsose drid ofrecieron subsidios al rey para
entre los que se batian, les reprendió continuar la guerra contra el de Gra
con voz firme su proceder, indigno de nada. Los castellanos se apoderaron de
caballeros, les hizo ver la traicion que Huescar, si bien los moros derrotaron
hacian á su patria, y les obligó á ha á don Juan de Sotomayor, gran maes
cerse amigos hasta la muerte los que tre de Alcántara.
asi comprometian una batalla que se Continuó don Alvaro la guerra con
anunciaba como un triunfo seguro para tra los moros con la mayor felicidad,
los cristianos. porque don Juan empleaba todas las
Volvió el condestable á colocarse al fuerzas contra ellos, no teniendo que
frente de los cristianos, los animó de temer nada de los reyes de Aragon y
nuevo, invocó á Santiago y marchó de de Navarra, que habian emprendido
recho con el cuerpo de ejército contra sus guerras en Italia.
los moros, desbaratándolos y decidien Nueve años de paz permitieron al
do la accion. Diez mil moros quedaron condestable consagrarse al buen gobier
muertos en el campo: los demas toma no del reino, dedicándose á mejorar la
ron la fuga, y perdieron sus bagajes. legislacion, á hacer grandes mejoras en
Don Alvaro hizo prisionero, un cuerpo la administracion de justicia y en el
de ejército que habia quedado aislado régimen interior de los pueblos, y de
en una montaña, y despues de haber mostrando que era tan buen adminis
saqueado todo el pais de las cercanías trador como esforzado capitan, tan en
de Granada se retiró á sus estados. tendido ministro en el gabinete como
1)ON ALVARO DE LUNA. 11

caudillo en el campo de batalla. Amigo atrevia á reprimirlos. El rey de Navar


de la magnificencia, del lujo y del faus ra, el infante don Enrique y el almi
to, habituado á él desde muy niño, aga rante, le escribieron una carta desde
sajó al rey y á su córte espléndidamen Medina de Rioseco, en que le esponian
te en Tordesillas, y cuando pasaron que solo habian tomado las armas con
por Escalona, donde tenia su casa. Man tra don Alvaro de Luna, porque imo
tuvo justas en Madrid y en Valladolid, nia nuevos tributos sin su consenti
asistiendo á esta última el rey y que miento, porque despojaba á muchas
brando dos lanzas. El condestable os personas de sus bienes arbitrariamen
tentaba en su madura edad el mismo te, y hacia prender á algunos señores
ardor y la misma lozanía juvenil que y quitarles la vida sin razon ni justi
en sus primeros años. cia, disponiendo á su gusto de los em
Hecha la paz definitiva entre los re pleos, dándolos á sus parientes y á los
yes de Castilla, Aragon y Navarra, el 22 de su casa, amenazando á los ministros
de setiembre de 1436, se obligó Casti si no se conformaban con su voluntad;
lla á conceder una amnistía general á que en Arévalo habian matado á un
todos los castellanos que habian toma hombre á su misma presencia, y á otro
do parte por el rey de Navarra, á de le habia hecho dar de palos; que habia
volver las plazas mútuamente conquis hecho acuñar moneda inferior á la ley,
tadas, y á un olvido completo de todo en fin, que tenia á su magestad en una
lo pasado. El príncipe de Asturias, de vergonzosa servidumbre, y que era pre
quien habia sido nombrado antes ayo ciso que apartase de sí á un hombre tan
el condestable de Castilla, don Alvaro, peligroso, siendo muy conveniente que
se desposó con doña Blanca, infanta de él con el príncipe su hijo gobernara li
Navarra, una de las mugeres mas be bremente el reino, y que si tal hiciese,
llas de España. ellos con los que con ellos estaban, tor
Poco tiempo despues el rey don narian gustosos á servirle y obede
Juan hizo prenderá don Pedro Manri cerle.
que, mandándole poner en el castillo El rey rechazó cuanto esponian en
de Roa, pero permitiéndole que algu la carta, y los mandó las mayores
nos dias pudiese salir á caza. Don Pe penas que desistiesen de su rebelion,
dro Manrique fué trasladado despues á escribiendo sobre ello á todas las ciu
otro castillo, de donde se escapó, y dades del reino. El príncipe de Astu
marchó á reunirse con los desconten rias, engañado y seducido, tomó el par--
tos. El rey de Navarra no los quiso tido de los descontentos y fué á unirse
proteger entonces, como lo habia he con ellos.
cho en todas las ocasiones en que hu El infante don Enrique se apoderó
biera revueltas en Castilla, y si solo in en tanto de Toledo. El rey fué allá con
terpuso su mediacion para reconciliar sus tropas, pero por mas edictos que
lo con el rey. publicó para animar á sus partidarios
No tardaron en estallar nuevas tur é intimidar á los rebeldes, no pudo
baciones, porque muchos grandes, en conseguirlo. Don Alvaro de Luna y su
vez de acudir á la guerra de Granada, hermano el arzobispo de Toledo, reu
que se seguia con el mayor vigor, mar nieron muchas tropas en Escalona. Los
charon á reunirse con los revoltosos. descontentos le desafiaron á decidir sus
Al fin se llegó á una composicion, des diferencias; empero el rey prohibió á
pues de muchas dificultades y confe unos y á otros el venir á las manos bajo
rencias, consintiendo el rey de Casti penas rigorosas. Los partidarios del re y
lla en restituir al de Navarra y al in habian conseguido felizmente algunas
fante don Enrique todas las plazas que victorias, y por este motivo comenzó á
en otro tiempo habia poseido, y des confiscar los bienes de los sublevados.
terrar de la córte por seis meses al El príncipe de Asturias y la reina
condestable. -

propusieron la conciliacion, que no qui


Esta concordia no duró mucho tiem so aceptar el rey. El condestable, y el
po, la osadía de los desconten arzobispo de Toledo se fueron á Medi
tos se habia acrecentado, y el rey, na del Campo con sus gentes, adonde
aunque con fuerzas suficientes, no se se hallaba el rey, y habiendo entrado
Q CAUSAS CELEIBRES.

en aquella villa los confederados, se el condestable creian tenia ligadas y ata


Salieron los otros precipitadamente, ha das todas las potencias corporales e in
biéndose colocado el rey en la plaza telectuales del rey por mágicas y diabó
con sus tropas para dar lugar á que se licas encantaciones para que no pudiese
saliesen, lo que hicieron por espreso usar, salvo lo que él quisiese, ni de la
mandato del rey mismo, pues que el memoria para que recorduse, ni del en
condestable queria morir alli con ho— tendimiento para que entendiese, ni de
nor antes que huir. la voluntad para que amase, ni de la
No habia esperanza alguna de que voz para que hablase, salvo lo que él
las cosas llegasen á términos de con quisiera y con quien y ante tun
ciliacion. Reuniéronse en Castronuño to, que no habia religioso de la órden
compromisarios de una y otra parte, y mas estrecha del mundo que se hallase
despues de muchos altercados y con tan sometido á su superior cuanto lo es—
sultas don Juan II, tuvo que suscribir á taba la persona del rey al querer y vo
un humillante tratado con veinte y luntad del condestable; no ¿ 0 770
nueve artículos, en que se determina moria entre tantos privados como ha ha
ba que saliese desterrado el condesta bido en el mundo de reyes y grandes,
ble don Alvaro de Luna de la córte por que se atreviese á hacer cosas tales como
seis meses, sin poder escribir en este las que habia hecho el condestable.
tiempo al rey ni tratar cosa alguna en El rey no contestó á esta carta.
daño de los ¿ caballeros de Continuaron las cosas como si no exis
la liga; que diese en rehenes á su hijo tiese la concordia de Castronuño. Los
primogénito; que nueve de sus princi confederados dominaban en todas par
pales castillos quedasen secuestrados; tes. Encendiéronse discusiones escan
que se restituyesen todas las tierras dalosas en la órden de Calatrava, y el
que se habian confiscado; que se revo rey tuvo que ir con tropas á aplacarlas,
casen todas las gracias que se habian sirviéndose de los mismos señores que
concedido; que se diesen, finalmente, habian formado poco antes la liga contra
¿ nulos todos los procesos que se hu él para reducir á los amotinados que
iesen formado contra el infante ó con Se ¿ levantado por todas partes,
tra cualquiera de los aliados. En virtud (1443). El rey don Juan se fué á Ma
de este convenio don Alvaro salió de drigal, donde los confederados, á cuyo
Castronuño para Sepúlveda, ciudad de frente se hallaba el príncipe de Astu
º le hizo merced el rey en lugar rias, le tuvieron como prisionero po
de la de Cuellar, que le dió al rey de niendo á su lado para guardarle á la
Navarra. hermana del almirante y á otro señor,
Al salir de la córte dejó tan bien lo que causó al rey una gran melan
dispuestas las cosas don Alvaro de Lu colía.
na, que en breve moviéronse nuevas Hubo, sin embargo, un eclesiástico,
discordias, y el rey negó su favor á to hombre de genio, travieso, fecundo en
dos los que le habian hecho pasar por recursos, el obispo de Avila don Lope
la humillacion de desterrar á su favo Barrientos, el que emprendió rescatar
rito, no guiándose sino por sus agen al rey y al condestable, de la cautivi
tes secretos, y marchándóse á poco dad al uno, y del destierro al otro, y
tiempo con el mayor sigilo y repenti cambiar la situacion de las cosas. Aquel
namente á Salamanca, protestando asi astuto prelado, amigo antiguo de don
de la violencia que habia sufrido por el Alvaro, habia sido maestro del prínci
tratado de Castronuño. Los confede pe de Asturias, y valiéndose de su in
rados se fueron en seguida á Salaman fluencia, y tambien por medio del fa
ca; pero el rey se retiró á Bonilla de la vorito del príncipe, don Juan Pacheco,
Sierra, pueblo distante catorce leguas logró persuadir al príncipe, hombre jó
de aquella ciudad. En tal estado los ven y muy débil, de la necesidad que
confederados se reunieron en Avila, y tenia de libertar á su padre de la pri
alzaron una solemne acusacion contra sion en que le tenian constituido el
el condestable don Alvaro do Luna. rey de Navarra y el almirante. Hizo en
Terminaba esta famosa acta de acu trar en esta especie de conspiracion á
sacion con estas notables palabras: que favor del rey, al conde de Haro y á
D0N ALVARO DE LUNA. 13

otros muchos señores. Los confedera Muy cerca de Olmedo, y acompaña


dos, desconfiados siempre, y recelosos dos de unos pocos, don Alvaro y el prín
de las contínuas entrevistas del prín cipe encontraron una hueste imponente
cipe con su padre, trasladaron á éste que les hizo retroceder con bastante
á la fortaleza de Portillo, encargando apuro hasta su propio campo, donde
su custodia al conde de Castro. El in fueron sostenidos, siendo aquella á su
fatigable Barrientos, obispo de Avila, vez cargada por los soldados del rey.
hizo entrar en sus planes al arzobispo hasta cerca de los muros. Retirábanse al
de Toledo, que habia reemplazado por campamento, cuando se presentó el rey
muerte al hermano de don Alvaro de de Navarra. El de Castilla fué de opinion
Luna, á los condes de Castañeda y de de que no se empeñase la lucha estan
Alba, á Iñigo Lopez de Mendoza y otros do ya tan próxima la noche; empero
varios. Llegado el momento oportuno, don Alvaro se opone, arrastra á causa
el príncipe de Asturias alzó la voz pro de su influencia el ánimo del débil mo
clamando la libertad de su padre. Si narca, y le proporciona con su consejo
guiéronle los señores que estaban en su y con el esfuerzo de su brazo un com
proyecto con sus hombres de armas, y pleto triunfo. Dispone en órden de ba
reuniendo hasta tres mil lanzas y cua talla sus tropas, las habla con enérgi
tro mil infantes se dirigió sobre Porti ca elocuencia, arremetiendo y reno
llo, y el rey, ya de acuerdo, encontró vando el arrojo que habia demostrado
medio de escaparse de alli y reunirse en otro tiempo en la vega de Granada
con el príncipe y sus partidarios, di contra los árabes: arrolla completa
rigiéndose sobre Burgos. El rey de Na mente á los enemigos y sostiene la lu
varra y los suyos se llenaron de tal cha con ardor. Cae la bandera de don
consternacion, que salió de Tordesillas Alvaro de Luna, este es herido grave
y abandonando á Castilla se marchó mente en un muslo: pero, lejos de re
con sus tropas á Aragon. El infante tirarse del campo de batalla , conti
don Enrique perdió todas las Andalu núa haciendo prodigios de valor, ano
cías, y el rey se halló á fines del año nada al enemigo y le obliga á acogerse
de 1444 con mas autoridad y poder á Olmedo, haciéndole mas de trescien
que nunca habia tenido. tos prisioneros, quedando muchos de
La retirada del rey de Navarra, pro los señores en el campo de batalla, ha
porcionó al rey don Juan II el apode biendo peleado cuerpo á cuerpo. San
rarse otra vez de todas las villas y se gre inútil derramada en contiendas
ñoríos que aquel monarca poseia en civiles; cuando empleada en arrojar
este reino. Alzóse el destierro á don los moros de Granada hubiera acelera
Alvaro de Luna, y unido éste al prín do en muchos años la completa liber
cipe heredero, marchó en persecucion tad de España!
del infante don Enrique, que habia Completo fué el triunfo de don Al
perdido ya casi toda la Andalucía. El varo; cayeron en su poder los estan
rey de Navarra, resuelto siempre á dartes de don Enrique, del almirante
abandonar su reino para venir á inter de Castilla y otros. El revoltoso infan
venir y gobernar el de Castilla, levan te don Enrique salió herido de una ma
tó sus tropas, reunió los descontentos, no, herida que muy en breve habia de
les mandó que uniéndose con don ocasionarle la muerte. Terrible fué y
Enrique, vinieran á juntarse con él en sangrienta la batalla de Olmedo: y hu
Olmedo. Tomaron el rey y el condes biera sido mas si la noche no hubiera
table todas las disposiciones necesarias tendido su manto sobre tantos horro
para impedir esta union: pero no pu res. Tan completo fué el triunfo de don
dieron conseguirlo y se presentaron Alvaro, tanto el terror que infundió en
delante de aquella plaza con todas sus el ánimo de los enemigos, que el rey
tropas. Don Alvaro desafió á don Juan de Navarra huyó aquella misma noche.
y á don Enrique personalmente; pero Celebróse consejo de guerra en la
rehusaron acudir al reto. Despues de tienda del condestable, por el estado
algunos dias de escaramuzas, trabóse en que se hallaba á causa de sus heri
al fin la batalla, que debia ser tan fc das, y el rey don Juan, entusiasmado
cunda en resultados. con la victoria que acababa de conse
14 CAUSAS CELEBIRES.

guir su favorito, opinó por que se per sarle con doña Isabel, hija de don Juan,
siguiese sin tregua al rey de Navarra; infante de Portugal, manejando este
empero don Alvaro, tan esforzado ca negocio sin contar con el consenti
pitan como hombre de Estado, hizo miento del rey, y aun sin darle el me
prevalecer su opinion de que debia nor conocimiento de él: tanta era la
acabarse primero con el poder de los seguridad que tenia de su influencia
grandes que habian tomado partido por en el ánimo del monarca. Este, sin em
el invasor, ocupando sus castillos. Es— bargo, sintió mucho el paso que habia
to era cortar de raiz el mal ahogando dado su favorito, porque pensaba ca
el fecundo y funesto gérmen de tantas sarse con una princesa de Francia;
revueltas y de tan contínuos disturbios pero no se atrevió á contradecirle,
civiles. aprobó el proyecto, aunque esto fué
Grande fué el triunfo de Olmedo. el principio del aborrecimiento que
Alli cayeron prisioneros el almirante, empezó á germinar en su corazon y
don Enrique su hermano, el conde de que debia ocasionar la pérdida de don
Castro y su hijo, y otros muchos per Álvaro. Calló el rey, tan grande era el
sonages de distincion. El rey, por con poder que tenia el favorito sobre su
sejo de don Alvaro, hizo quitar la vida espíritu: despues hizo algunas promo
á algunos de estos personages, y con ciones y concedió algunas gracias á
fiscó los bienes de todos los que ha peticion del príncipe, y que fueron co
bian tomado las armas contra él. A la mo premio de la reconciliacion ¿
mañana siguiente de la batalla, prefi Brilló tambien el celo y la lealtad
riendo al reposo que exigian sus heri del condestable don Alvaro de Luna
das el servir los intereses de su rey, en 1446 al atacar el formidable castillo
asiste al consejo y en él opina contra de Atienza, que todavía se alzaba man
el conde de Benavente su deudo, cu tenido por los parciales del rey de Na
yas villas y castillos ocupó sin resis varra, y en que doscientos cincuenta
tencia por su parentesco, asi como los caballeros y quinientos peones, abaste
de Medina, Torrelobaton y otros varios cidos de víveres y preparados para un
sin descansar, haciéndose llevar al largo sitio, mantenian aquella fortaleza.
frente de sus tropas en una camilla ó Ilizo sobre ella un reconocimiento
andas. El infante don Enrique, el con don Alvaro, y la cercó estrechamente.
tínuo revolvedor de Castilla, mientras Volvió con el rey al campamento, y
huye á Aragon herido en la mano, cae comenzó á operar sin mas que con seis
enfermo y muere de sus resultas en cientos hombres de armas supliendo a
Calatayud. Era éste gran maestre de la todo su inagotable valor é infatigable
órden militar de Santiago; su muerte actividad, dando repetidas pruebas de
dejaba vacante esta altísima dignidad, valor y de talento. Palmo a palmo to
tan influyente en aquellos siglos, y el mó los arrabales de aquella entonces
rey don Juan, reconocido á los grandes importante plaza, llevando en todo la
méritos del condestable, quiso hacerle parte mas arriesgada del combate, y
gefe de aquella órden que recibió con conteniendo él solo una vez el impetu
aplauso general la insinuacion del rey, de los soldados que trataban de hacer
pues todos los caballeros de Santiago una vigorosa salida.
se en vanecieron de ser mandados por Llevó consigo para adiestrarle en
un capitan tan valeroso y por uno de su escuela y en los azares de la guer
los señores mas opulentos y magnifi ra á su hijo don Juan, niño de diez
cos de su siglo, y le eligieron por su años, colocándolo entre su gente, y no
maestre en 4 45. escaseando los peligros que podian
El año 1446, el príncipe de Asturias presentarse.
disiente de su padre y se retira á Sego En un segundo ataque que dió al
via; don Alvaro, que habia sido su ayo, castillo penetró en él, y se adelantó
y que conoce el grave perjuicio que trae tanto que era segura é inevitable su
la desunion del padre y del hijo, trata muerte si cuatro de sus pages, á quie
en secreto de hacer venir al condesta nes aquel mismo dia antes de la bata
ble de Portugal, para ayudar al rey, y lla habia armado caballeros, no le hu
como este se hallaba viudo, negociaca biesen seguido.
l) ON ALVARO 1, E LUNA. 5

Hallábase herido en la cabeza y en Tal vez el lujo que desplegó hizo


el hombro, y se obstinaba en no reti mostrarse celosa á la reina de su opu
rarse del campo, teniendo que ser sa lencia y poderío, y comenzó esta á tra
cado casi á la fuerza del medio de la bajar, lenta, pero asíduamente, en el
refriega por aquellos denodados don ánimo del rey contra el hombre que la
celes; pero marchaba él, siempre de habia colocado en el régio tálamo.
trás de los mismos cubriendo su reti Las divisiones que habia entre el
rada. Un hombre de armas de los ene príncipe de Asturias y el rey, tan pron
migos se le presentó y cogió la rienda to como se aplacaban se volvian á sus—
de su caballo: un tajo de la espada del citar, y cada dia se iban aumentando
condestable derribó al suelo su brazo, con el pretesto de impedir el príncipe
y continuó adelante. Apenas aplican la tiranía de don Alvaro de Luna. Cuan
los primeros remedios á sus heridas do se hallaban para venir á las manos,
cuando vuelve inmediatamente á la por la mediacion de varios obispos y
batalla para reanimar á sus gentes, y otros señores, pusieron ambos parti
en breve se apodera de la villa. dos sus diferencias en manos de don
Grande mortandad hubo en la sé Juan Pacheco, favorito del príncipe, y
rie de encarnizados combates que cos de don Alvaro de Luna, favorito del
tó la toma de Atienza. Don Alvaro en rey, y en 11 de mayo se terminó y
persona intima al castillo su entrega, concluyó un tratado de paz.
y desechada la propuesta hizo volar El rey volvió sus armas contra el
las minas que dirigió él mismo, des de Navarra, y al mismo tiempo don
truyendo parte de los muros, y sepul Juan Pacheco, enemigo capital de don
tando en sus ruinas á muchos de los Alvaro de Luna, y que ejercia sobre el
sitiados. ánimo del príncipe la misma influencia
En el mayor apuro, sin agua para ¿ don Alvaro sobre su padre, encen
apagar la sed, cortaron los corbejones ió el ánimo de aquel, y le instó á que
á los caballos, los arrojaron fuera del pidiese á su padre la separacion de don
castillo; pero por fin tuvieron que en Alvaro.
tregar la fortaleza, que el rey en se No ignoraba don Juan II la trama
guida aportilló. que se urdia contra su favorito; pero
Despues de la toma de Atienza ocu oia todos los dias los consejos de la
pó casi todo el año 46 y 47 en ir re reina Isabel, habia visto sus riquezas,
corriendo casi toda la Castilla, y to— veia eclipsado su poder por la opulen
mando sucesivamente los castillos y cia, hasta por las dotes personales de
fortalezas de los señores que se habian don Alvaro, que él mas que ningun
rebelado, y que se mantenian firmes otro habia sabido apreciar, y no le pe
contra el rey, siendo en algunas par— saba, antes bien se complacia interior
tes tan tenaz y tan larga la resisten mente en aquella tormenta que se iba
cia, que fué necesario hacer uso de la amontonando sobre la cabeza del favo
artillería de batir para tomarles sus rito, que era para él un peso, un fre
plazas. no insoportable desde que el amor le
Sometidos los nobles señores que se habia hecho ceder á otra influencia.
habian levantado en el reino, fué á Tan cierto es que las almas débiles
instancia del mismo rey á descansar necesitan siempre de uno que las do
un poco á su magnífica casa de Escalo mine!
ma, y alli fueron tambien los reyes y Don Alvaro de Luna era demasiado
permanecieron ocho dias, quedando hábil para poder conocer claramente la
asombrados ellos y toda la córte de la mudanza que empezaba á obrarse en el
suntuosidad del palacio, del lujo, de la corazon del rey. Hízole entender que
riqueza de sus habitaciones, del gusto por su autoridad, por su cuidado, por
que desplegaba en su servicio, obse su vigilancia, por la fuerza de su bra
quiándolos á porfía con cacerías, festi zo se mantenia en el trono; que le com
nes, justas, torneos y agasajos que en batian á la vez la envidia de los gran
aquella época hubieran sido dignos de des, el mal querer de la reina, supedi
uno de los soberanos mas poderosos de tada por lisonjeros favoritos que todo
a Europa. se lo debian á él, y la impaciencia de
16 CAUSAS CELEBRES.

reinar de su hijo; y que este queria ciones de sus respectivos favoritos,


apartarle de su lado para despues pri fuesen el uno á Tordesillas y el otro á
var á su mismo padre de la corona. Villaverde, debiendo verse á la mitad
Causaron al rey tanto temor estas ra del camino; pero en esta entrevista
zones, conoció sin duda lo tan acerta lejos de venir á un arreglo se encen
do y lo exacto de este cálculo, que se dieron mas los ánimos y se aumenta
resolvió á toda costa á sostenerá don ron las disensiones, porque de aque
Alvaro con mas empeño que nunca; y llas conferencias resultó el acordar la
por consejo suyo hizo proposiciones prision de varios é importantes perso
ventajosísimas al almirante y al conde nages, los cuales fueron destinados á
de Benavente para ver si querian ser varios castillos, á escepcion del almi
le fieles. rante y del conde de Castro, que lo
Hallábase el reino de Castilla en el graron salvarse y llegar á Aragon para
estado mas triste y lamentable, presa pedir auxilio y favor á este rey contra
de facciones que no le dejahan un mo el de Castilla.
mento de paz. Por consejo de don Alvaro de Luna
El rey de Navarra para vengarse se convocaron los procuradores de las
del de Castilla empeñó unas compañías ciudades, y se propuso á su aprobacion
de gascones para que entrasen por es la concordia del rey con su hijo, y la
te reino y todo lo llevasen á sangre y distribucion de todos los bienes de los
fuego. Los moros, como aliados del de condes presos y fugados. El conde de
Navarra, se apoderaron de muchas pla Benavente, cuñado de don Alvaro, ayu
zas, é hicieron infinidad de cristianos dado de algunos de su partido, logró
cautivos. El príncipe de Asturias man fugarse de la fortaleza de Portillo, en
dó al mismo tiempo á las ciudades que la que le tenian preso, y se fortificó
le obedecian que no defendiesen las en la suya de Benavente; pero á la no
fronteras, para que los progresos de ticia de que contra él venian las tro
los moros hiciesen mas odioso á su pa pas del rey, se refugió en Portugal.
dre, y le pusiesen en la necesidad de Entretanto don Alvaro tuvo que
ceder el trono, y que la corona pasase
entonces á su frente.
¿ la frontera de Aragon, adonde
sobre Cuenca con mil ginetes y cinco
En medio de tan gran conflicto, en mil peones se dirigia el hijo bastardo
situacion tan apurada, el rey don del rey de Navarra. Don Alvaro, sin
Juan II, por consejo de don Alvaro de arredrarse por lo escaso de su fuerza,
Luna, lo disimuló todo. compuesta solo de ochenta ginetes y
El rev de Navarra buscaba medios trescientos hombres de armas, se di
para escitar nuevas turbaciones en rige á marchas forzadas sobre la ciudad
Castilla, con el fin de recuperar las pla contrariado por el temporal; pero es
zas que en ella habia poseido. tal el terror de su nombre, tal la fama
Don Alvaro trabajó en reconciliar al de sus anteriores hazañas, única cosa
rey con el príncipe, y para esto se va con que contaba el condestable, cuyos
lió de su favorito don Juan Pacheco, soldados iban estropeados por la sier
confederándose ambos para ser los so ra, y sin mas alimento que el ejemplo
los que gobernaran á su arbitrio sin de su noble y valeroso caudillo, que
estorbo ni embarazo al monarca y al con número tan crecido de fuerzas no
príncipe. Entendiéronse entre sí los le esperaron, y huyeron aterrados re
dos favoritos, y acordaron prender al plegándose á Aragon.
almirante, á su hermano don Enrique, La ciudad de Toledo en el año 1449
á los condes de Benavente, de Castro, se rebeló, porque el gran maestre don
de Alba, y á otros varios, muchos de Alvaro de Luna, con órden de levan
ellos, si bien enemigos antes de don tar tropas por el rey, entró en ella, y
Alvaro de Luna, amigos fieles despues pidió un empréstito considerable. Al
que los habia perdonado cuando fueron borotóse el populacho al toque de la
vencidos en la batalla de Olmedo. campana mayor; se apoderó de las
Habíase dispuesto que el rey y el puertas y torres, quemó la casa del re
príncipe, que tan pronto estaban acor caudador del empréstito, y adhirién
des como discordes segun las inspira dose al movimiento popular el gober—
l)0N ALVARO DE LUNA. 17

nador de la ciudad, don Pedro Sar do á los habitantes de Toledo, y que te


miento, que ocupaba el alcázar y era nia amontonadas en el alcázar, llegan
el alcalde mayor por el rey, proclama do la cosa á punto de permitir el prín
la defensa de sus antiguos fueros y pri cipe la libre salida de mas de doscien—
vilegios que creian vulnerados por la tas acémilas cargadas con el fruto de
conducta del condestable; y á pretesto las escandalosas depredaciones del go—
de esta defensa, y aprovechando aque bernador.
llas circunstancias se apoderó de la ha Mientras esto sucedia en el interior
cienda y bienes de los mas ricos ciu del reino, los moros continuaban esten—
dadanos, y los puso presos en el alcá diendo sus conquistas en la frontera.
zar. Don Alvaro de Luna no tenia fuer Cansado el rey de tantas turbaciones y
zas para reducir á la ciudad imperial. revueltas, resolvió hacer la paz con los
Escribió al rey, que cercaba á Bena descontentos, y cuando esta se iba á
vente, para que viniese á ayudarle. Di verificar, el príncipe estaba resuelto á
rígese el rey desde Benavente á sofocar prender á su favorito don Juan Pache
este tumulto; mas al aproximarse á la co; pero como el príncipe era ligero, y
ciudad, Pedro Sarmiento le intima que no sabia callar nada, el favorito supo
se le negará la entrada mientras le su desgracia y pidió su retiro. Poco
acompañe el conde don Alvaro de Lu— tiempo despues el príncipe, que era
na, á quien miraba como el tirano del mas débil que su padre, lo volvió á
reino. El rey insistió en entrar, pero llamar.
la ciudad se defendió con artillería, y Si débil era el padre, no lo era me—
el rey y el favorito tuvieron que reti nos el hijo; asi es que en aquel caos
rarse á Illescas, despues á Avila y á indefinible de intrigas y revueltas no
Valladolid para contener al conde de se encuentra ni consecuencia, ni leal—
Benavente, que aprovechándose de tad, ni fé. Unido el príncipe en breve al
aquella ocasion habia vuelto con fuer rey y al condestable, entra en Toledo
zas de Portugal y fortificado de nuevo con don Alvaro, ciudad que solo habia
su villa. querido antes , entregarse al príncipe,
Entonces Pedro Sarmiento llamó á y queda don Alvaro de Luna encargado
Toledo al príncipe don Enrique, y le de la guarda de las puertas y de la for—
entregó la ciudad, pero no las puer taleza de una ciudad que habia tomado
tas, ni los puentes, ni el alcázar. El por pretesto en su rebelion el alzarse
príncipe suplicó entonces á su padre contra su valimiento.
que levantase el sitio, ofreciéndole que El estado de Castilla llamó la aten
se compondrian amigablemente las di cion del papa, y para obligar á los re
ferencias, y el rey condescendió por no beldes á la obediencia del rey envió
venir á las manos en una accion contra una bula, con comision á los prelados
su hijo, que era tal el odio que enton de Castilla y de Leon para escomul
ces le manifestaba, que hizo quitar la garlos á todos los que no se aviniesen
vida y encerrar en una fortaleza á al desde luego. Asi es que reunidos los
gunos individuos del cabildo y del cle principales gefes de los encontrados
ro, porque andaban en tratos con su bandos que agitaban á Castilla, se
padre. acordó despues de varias conferencias
Continuaba Sarmiento entretanto º para mayor firmeza y estabilidad
usurpando el poder en Toledo, cuya e lo pactado se jurase con desusada é
rebelion duró hasta el año de 1450, en imponente solemnidad en el convento
que habiendo vuelto el príncipe de de Santa Clara, la concordia. Presente
una espedicion á Roa y á Segovia, in á la misa mayor el rey, y el príncipe
timó á Pedro Sarmiento que entregase de Asturias, don Alvaro, el maestre
el alcázar al maestre de Calatrava y de Calatrava, el marqués de Villena, y
desocupara la ciudad. Intentó resistir; toda la córte, se leyeron los capítulos
pero viendo las fuerzas del príncipe y de la Concordia, teniendo alzada la
el odio que le cobró el pueblo, cedió, santísima Hostia, y ante la presencia
si bien á condicion de que se le permi del cuerpo de Nuestro Señor Jesucristo
tiera salir de la ciudad llevándose las prestaron cada uno de ellos juramento
inmensas riquezas que habia arrebata de guardarlos y cumplirlos.
3
Tomo 1.
18 CAUSAS CELEBRES.

El 23 de abril de este año la reina diaban graves diferencias. Debian ocu


Isabel, que cada dia iba adquiriendo par á la fuerza la casa en que paraba
mas ascendiente sobre el ánimo de el condestable, y apoderarse de él vi
Juan II, dió á luz en Madrigal á la in vo ó muerto.
fanta doña Isabel, la que debia ser en Don Alvaro vivia tambien muy so
su dia reina de Castilla, y unir para bre aviso. Si bien tenia muchos enemi
siempre por su matrimonio con don gos, como hombre rico y poderoso, te
Fernando , rey de Aragon, estas dos nia quien le avisase de cuanto contra
coronas, y fundar con los descubri él se tramaba. Traspiró el proyecto, y
mientos de Colon, y las conquistas de se preparó á evitarlo. Comenzó á en
Hernan Cortés, la inmensa monarquía tender clara y terminantemente don
española, señora de dos mundos. Alvaro que le faltaba la confianza del
La reina continuaba siempre insti rey, y que Alfonso Perez de Vivero, á
gando al rey contra don Alvaro de Lu quien habia elevado hasta el punto de
na. Queria hacerlo prender, pero no se hacerle uno de los ministros del rey,
atrevia á ejecutarlo el débil monarca: fuerte con la confianza de la reina, y
hasta que don Alvaro Perez de Vive continuando en fingirse su amigo, era
ro, contador general del rey, hombre un traidor que cada dia le iba minando
oscuro que todo lo habia debido á la y preparando su perdicion.
generosidad del condestable, y que era Habia visto don Alvaro los mane
muy favorito de la reina, se unió al jos de éste para enemistarle con el rey
conde de Plasencia, al de Haro, al de y con su hijo. -

Benavente, al marqués de Santillana, y En Madrigal habia sabido por el


á algunos otros para este efecto, dán marqués de Villena, y habia con su
doles aviso de que don Alvaro de Luna gran vigilancia frustrado el conato de
trataba de atacarlos en sus castillos y asesinato que contra él tramaban.
apoderarse de sus personas. La mala voluntad del rey era tal
Solo faltaba una ocasion, que com que nada bastaba ya á vencerla. Habia
probase las revelaciones de Vivero, y salvado á éste de una muerte cierta en
esta en breve se la proporcionó la mis mismo, deteniendo con gran
ma ambicion de don Alvaro, el que no brio el caballo desbocado que amenaza
viendo ya en el reino grande alguno ba arrastrarle en su veloz carrera.
á quien temer, celoso del conde de En otra ocasion armó Vivero un al
Plasencia, don Pedro de Stúñiga, que boroto, con la esperanza de que siendo
vivia lejos de la córte, intentó apode el primero que acudia á sosegar las re
rarse de él por un golpe de mano. vueltas don Alvaro, pudiesen alli ma
Alfonso Perez de Vivero, que era tarle; empero esta vez mas cauteloso
traidor á la confianza de don Alvaro de envia á don Pedro, su hijo, que apla
Luna, reveló á aquel con tiempo sus ca el alboroto, pero que encuentra á
proyectos: se fortificó en la villa de Vivero armado contra su costumbre, y
Béjar, resuelto á sostenerse á todo á caballo, con mas de doscientos em
trance contra don Alvaro de Luna, y pleados de los encargados de recaudar
se puso de acuerdo con los condes de las contribuciones, y disponiéndose á
Haro y de Benavente, y con el mar— estorbarle el paso sin la presencia de
qués de Santillana, resolviendo todos don Alvaro.
concluir de una vez con el hombre que El rey marcha á Tordesillas sin de
los tenia en continua alarma, y cuya cir una sola palabra á don Alvaro,
vida era para ellos una contínua ame cuando antes y hasta entonces habia
ll 3 Za. consultado con él las menores accio
Formaron el plan de que los hijos nes. Con semejante desvío conoce éste
de los condes de Plasencia y de Haro, que se eclipsa su estrella, y trata de
llevando consigo quinientos , ginetes retirarse á cuidar de su casa, y á au
marchasen á Valladolid, á donde se ha mentarla y repararla de los grandes
llaba el rey y el condestable, dando gastos que habia hecho, y cediendo en
por pretesto de que marchaban á au su hijo el maestrazgo de Santiago para
xiliar al conde de Trastamara contra lo cual impetra y obtiene bula del papa;
el conde de Benavente, con el que me empero un movimiento de amor propio
DON ALVAlt0 l. E LUNA. 19

y de vergüenza le contiene. No quiere Receloso estaba don Alvaro conoci


que crean sus enemigos que cual co— da ya la mala voluntad de la reina,
barde ha vuelto la espalda y se ha fu— conociendo por esperiencia la debili
gado; y confiando en su poder, en sus dad del rey, y seguro de la traicion de
gentes, que eran cuatro mil lanzas, sin Alfonso de Vivero, por haber intercep
los caballeros y comendadores de la tado algunas cartas suyas importantes.
órden, resuelve desafiarlos á todos, y Hombre acostumbrado á los peligros, y
se dirige por otro camino distinto del en la confianza de dominarlos hasta
que habia, llevado el rey, á cuya feliz entonces, porque hemos visto que su
casualidad debió el no haber sido pre vida fué una contínua lucha, siguió al
so, y llegó antes que él mismo á Tor rey á Valladolid, donde éste le habia
desillas, disculpándose con la reina de convidado, y donde sin duda disponia
no ir á saludarla. llevar á efecto su inícua trama.
Vivero privaba cada vez mas con Dispusieron que sus enemigos en
la reina; era el hombre que dirigia sus trasen por la puerta de los carros del
proyectos; y ésta influia en el débil monasterio de San Benito, donde mo
ánimo de su esposo, quien siempre ne raba el rey, y que despues de la hora
de comer, mientras descansaba, lo ase
cesitaba una persona que lo dirigiese,
sinaran. Con tiempo supo don Alvaro
ora fuese su muger, ora fuese un valido.
En la persecucion contra don Al la trama contra él urdida, y, sin dejar
varo de Luna, trata de envolver Vive conocer en su rostro la menor señal
ro, no solamente á éste sino al maes— de alarma, ni manifestar la menor des
tre de Calatrava , , y al marqués de confianza, se apoderó de las llaves del
Villena, el favorito del príncipe. Aper— convento, hizo vigilar las puertas, y
cibense estos, conocen el peligro, y se presentó en el festin espléndida
proponen á don Alvaro que entre los mente vestido, con la alegría en la
tres con su gente destronen al rey, y frente y la sonrisa en los labios. Per
coloquen la corona de Castilla sobre la dida esta ocasion, frustrada esta ten
frente del príncipe de Asturias don En tativa de sus enemigos, le pareció lo
rique, demasiado impaciente con el mejor al rey el irse á Burgos, cuyo
largo reinado de su padre. castillo ocupaba don Iñigo de Zúñiga,
Don Alvaro, siempre leal, siempre hermano del conde de Plasencia.
confiado en el mérito de su persona y Aprovechando la reina, impaciente
en los grandes servicios que habia por llevar á cabo su empresa esta oca
prestado, y aleccionado ademas por la sion, escribió secretamente á la con
esperiencia, habiendo visto que en di desa de Rivadeo para que se presenta
versas ocasiones habia conjurado ma se con sus instrucciones al conde su
yores tormentas que la que sobre su tio. Al mismo tiempo, el rey y la rei
cabeza rugia en aquellos momentos, no na, mintiendo alegría y confianza en
aceptó este partido. sus semblantes, rogaron con repetidas
Persuadido de que en el juego que instancias á don Alvaro para que les
habia emprendido contra él la reina y acompañase á Burgos. Receloso éste al
su favorito se atentaba directamente á ver que aquella fortaleza estaba en po
su vida, trató de prevenir el peligro, der de uno de sus mayores enemigos,
ganando por la mano al traidor Alfon no se resolvió á este viage, sino des
so Perez de Vivero. Para captarse el pues de haber recibido el juramento por
aprecio de la córte dió cañas en Torde escrito de los principales señores de
sillas tan reñidas que murieron algu Burgos de ayudarle y defenderle contra
nos caballeros, saliendo herido grave cualquiera persona, de contar en
mente don Pedro, su hijo natural, grave Bribiesca con el señor de Haro, su ami
desgracia que preparó la de su padre, go, que reunia trescientas lanzas, y con
que fiado en su secretario Alfonso Gon seiscientas que su secretario, el trai
zalez de Tordesillas, no se cuidó de la dor Alfonso Gonzalez, le habia hecho
guardia que mandaba don Pedro, fuer creer que tenia, cuando solo llegaban
te de mil lanzas, y desbandada casi á trescientas.
toda de propósito por este hombre á El conde de Plasencia, al recibir el
quien habian ganado sus enemigos. mensage del rey, mandó á Burgos a
2) CAUSAS CELEBRES.

su hijo primogénito don Alvaro, con en vez de la anterior sumision, osten


Mosen Diego de Valera, y un secreta taba el mayor orgullo y desabrimiento.
rio. En Curiel encontró el primogénito Si muchos de los que habia sacado
de Zúñiga un recadero del rey con una de la oscuridad y llenado de bienes
cédula apremiante, en la que se le or eran traidores á la causa de don Al
denaba que, dejando cualquiera otra varo de Luna, tambien tenia amigos
cosa, se apresurase á llegar á Burgos firmes y decididos entre sus servi
y se metiese en la fortaleza. dores.
Don Alvaro, á cuyo alrededor mul Alfonso Gonzalez, que tenia á su
tiplicaban las asechanzas sus enemi cargo la custodia de su casa, le era
gos, se libertó de una de ellas en Ci traidor y le engañaba diciéndole tener
gales, pretestando una indisposicion seiscientas lanzas cuando no escedian
para no ir á una cacería preparada al de la mitad, teniendo disuelta por su
intento, y en otra ocasion haciendo de descuido la guardia que mandaba su
sistir al rey, á cuyo lado iba siempre, hijo don Pedro, el que hemos dicho que
del empeño decidido que tenia de ir á habia quedado herido en Cuellar.
Castrogeriz, y cuyo señor, que lo era El maestre esperaba cada dia la lle
por don Alvaro de Luna, habian ganado gada de su hijo, y para prepararse tam
con dádivas y promesas. bien á cualquier evento que pudiese
Llegó á Burgos el condestable, y me ocurrir, dispuso que dos arcas de mo
ditando seriamente en su posicion, se neda de oro que tenia en el monasterio
decidió á abandonar la córte, dejando de San Benito de Valladolid, fuesen sa
antes buenos lados y suyos al rey para cadas de alli y trasladadas á la forta
no tener que temer en lo sucesivo. Para leza de su villa de Portillo. Se negó á
este caso habia renunciado en su hijo seguir el parecer de su camarero don
don Juan el maestrazgo de Santiago y Gonzalo Chacon, comendador de Mon
habia obtenido para don Pedro, su hi tiel, el cual opinaba que debia de lle
jo natural que habia tenido, el conda varlas á la villa de Santisteban de Gor
do de Ledesma, y otras varias gracias maz, cuya fortaleza era muy firme y el
y mercedes para otro hijo natural que alcaide uno de los nobles mas honra
tenia, llamado don Martin, reserván— dos y decididos por el maestre. El co
dose ceder en cualquiera de ellos el mendador Gonzalo Chacon unia á una
ducado de Trujillo. El conde de Pla grande fidelidad por el maestre, cuya
sencia, á quien el rey habia escrito hechura era, una prudencia y una pre
que se dirigiese á Burgos con el objeto vision poco comunes en la juventud.
de prender al condestable, escarmen Asi es que porfió con el maestre para
tado de las diversas veces que don Al que el dinero se mandase á aquella for
varo habia sido desterrado y vuelto á taleza, y no á la de Portillo, porque
llamar despues triunfante á la córte, esta no tenia agua y era fácil de ser to
creyó que era tambien un ardid del mada en el caso de un ataque, pero se
astuto favorito, y necesitó que le lleva obstinó en ello el maestre, y se cum
se cartas, juramentos, y diversos men plieron sus deseos.
sages para que se moviese. Otra de las personas que rodeaban
Creyéndose sin duda firme y con al maestre, y cuyo celo y decision por
mas poder que el mismo condestable él era tanta como la e mismo Cha
el rey en Burgos, ya no se curó de di con , comendador de Montiel, era don
simular, y en público le dió claras Fernando de Rivadeneira, empero éste
muestras de su malquerencia; entre era un tipo y un carácter distinto del
otras ocasiones, yendo un dia al mo otro. Resplandecia en aquel la pruden
nasterio de las Huelgas, y siguiéndole cia, en éste el valor, y fiándolo todo
á cierta distancia don Alvaro de Luna, á la fuerza de su brazo, vino á ser
el rey, lejos de pararse, como lo habia inadvertidamente y á su pesar una de
hecho en otras ocasiones, siguió ade las ocasiones mas próximas de la pér
lante y entró en el monasterio sin dida de don Alvaro de Luna.
aguardarle. Habia llegado la hora de Tal era la situacion de las cosas en
cesar el disimulo y de arrojar la más— Burgos, cuando el maestre tuvo con
cara, y como todas las almas débiles Vivero, en presencia de Rivadeneira,
DON ALVARO DE LUNA. 21

la conferencia con que hemos comen diese peligrar subiendo á ella, y que
zado nuestra historia. dar frustrado su plan, guardó la llave
Cada vez mas receloso de don Alfon hasta que llegase el momento de po
so Perez de Vivero, y siguiendo en un ner en ejecucion su tan bien calculado
todo las ideas de la época en que vivia, proyecto.
creyó don Alvaro que si lograba que Eligió precisamente para este in
se confesase por hallarse entonces en tento uno de los dias mas notables del
la Semana Santa, se separaria del mal cristianismo. El Viernes Santo por la
propósito que tenia éste de perderle y mañana, reunido con Vivero y Rivade
hacerle , traicion. Para esto hizo que neira, visitó don Alvaro las estaciones
Fernando de Rivadeneira se lo dijese como tenia de costumbre hacerlo en
y atrajese por cuantos medios pudiese. igual solemnidad todos los años.
Fuéronse ambos á un monasterio de Despues que las hubieron andado
los de Burgos, adonde habia abundan entró en la catedral, donde el rey se
cia , de confesores; pero Fernando no hallaba delante del monumento en una
pudo recabar de aquel que se confesa tribuna formada con cortinas, desde la
se, y antes bien le respondió que nun cual estaba oyendo el sermon. Predi
ca habia tenido menos contricion, ni cábale un fraile dominico de robus
en tan mala disposicion como entonces ta salud y colorado semblante, el cual
se hallaba para confesarse. se espresó con la mayor violencia, aun
Rivadeneira dió aviso de todo á su que sin nombrarlo, contra don Alvaro
amo don Alvaro, y éste, alarmado ya de Luna; muchas fueron las invecti
con el proceder de Alfonso Perez de vas y los insultos que dirigió contra él,
Vivero, lo estuvo cada vez mas, y asi marcando la historia de todos los actos
es que se recataba de él, á pesar de de su vida, y exhortando á todos á que
¿ este todos los dias iba á hablarle se levantaran contra su autor, y cual
os veces á su casa de los negocios, y si esto no bastase añadió todavía: uno
se le manifestaba muy parcial afecto que todos conoceis, y que está entre
para deslumbrarle mejor y ocu tar SuS nosotros!.....
maquinaciones. El rey no pudo tolerar la osadía é
Trató entonces el maestre de des insolencia con que se producia aquel
hacerse de un hombre tan contrario, religioso, y le hizo señal con el bas
creyendo que asi conjuraria la tormen ton mandándole que callase, como asi
ta que se formaba sobre su cabeza. lo verificó, saliéndose de la iglesia.
Para esto dispuso el quitarle la vi Don Alvaro se quejó en la misma
da en una torre que tenía en su habi iglesia al obispo, diciéndole que á él
tacion, desclavando el antepecho de un tocaba el saber por qué aquel fraile ha
balcon que habia en ella, para despues bia dicho tantas y tan vanas villanías,
de mostrarle las pruebas de su perfi que quién le habia escitado á ello, por
dia hacer que le arrojasen por ella y que seguramente no podia salir de él,
apareciese casual su caida. sino de otro, tan grande atrevimiento.
Habíale sujerido este pensamiento El obispo tomó á su cargo el averiguar
una torre que con iguales condiciones lo, y lo mandó prender.
á la que tenia cn Burgos poseia en su Terminado el oficio de la iglesia de
casa de Tordesillas, donde habia conce aquel dia, el rey se fué á su palacio,
bido la primera idea de deshacerse de acompañándole don Alvaro de Luna, y
don Alfonso Perez de Vivero. Asi, pues, porque ya era tarde se despidió del
trató de llevar adelante su plan largo rey bastante alterado é incomodado á
tiempo antes concebido, aprovechando causa de lo que el fraile tan desen
la torre que con iguales condiciones te frenadamente habia proferido contra
nia su alojamiento de Burgos, y de no él en la iglesia, pero desde entonces
demorar un momento mas su proyecto, tuvo para sí que aquello habia proce
teniendo secreto este artificio. Hizo dido de sujestiones de Alfonso Perez
desenclavar un lienzo de la baranda de Vivero con el fin de desencadenar
de la torre desde un poste á otro, sin y conmover el pueblo contra él.
que se pudiese conocer que estaba des Comió el maestre, subió á la torre
enclavado, y para que ningun otro pu cuya llave tenia, y en seguida hizo lla
22 CAUSAS CELEBlt ES.

mar á Fernando de Rivadeneira, á quien suelto ya á poner por ejecucion el pro


preguntó qué le habia parecido la in yecto de deshacerse de Vivero, subió
solencia del fraile dominico. don Alvaro á la torre, y llamó á su so
Contestóle Fernando de Rivadenei brino Juan de Luna, y delante de Ri
ra que le habia parecido muy mal, y vadeneira les encomendó que empuja
que lo peor era que él conocia cómo sen á Vivero cuando él se lo mandase,
iban las cosas, sin querer remediarlas; pero que antes queria confundirlo , y
que Alfonso Perez traia revueltas las hacerle confesar sus villanas traicio
cosas, y que aun habia de ver otras nes. Llegó Vivero, bien ageno de lo que
peores si no ponia mano en ello y las le esperaba, y todos tres entraron en
dejaba pasar, y no se lo dejaba matar la cámara donde se hallaba el maestre.
á él, porque solo con la muerte de Dirigióse este al desleal Vivero dicién
aquel traidor podrian escusarse todos dole:
los peligros que le amenazaban, y que —Decid, Alfonso Perez, ¿conoceis
él aquella muerte lejos de tenerla por esta letra?
un crímen, la consideraba como una Y al mismo tiempo le mostraba unas
virtud y un leal deber. cartas que tenia de él y del rey.
Entonces el maestre, que habia es Miróla Alfonso Perez, y contestó:
tado todo aquel dia bastante medita —Si señor.
bundo, le contestó quo él quisiera Díjole el maestre.
separará aquel hombre de aquella mal —¿Pues cuya es?
dad, pero que no pudiéndolo conse —Del señor rey es.
guir culpa suya era, que él debia im —¿Y esta otra?
putarse su muerte, y que asi se le en —Señor, es mia.
viase á llamar para d la paga me Entonces el maestre dijo á Fernan
recida. Instóle Fernando Rivadeneira do de Rivadeneira:
á que no dilatase mas el cumplimiento —Leed esas cartas.
de su propósito, porque él acababa de Leyó Rivadeneira, y en cuanto ter
saber de ciencia cierta que don Alvaro, minó su lectura turbóse terriblemente,
hijo del conde de Plasencia, y el ene y palideció de muerte Vivero, cuando
Inigo mas terrible del condestable, ha airadole dijo don Alvaro estas palabras:
bia sido llamado para venir con gente —Por cierto, cosa debida es, que
á Burgos. por cuantos caminos y amonestaciones
Mandó entonces el condestable á os he hecho, no habeis querido apar
uno de sus pages, don Francisco Mal taros de vuestras maldades que contra
donado, natural de Salamanca, que mí habeis urdido y amasado: que se
fuese á llamar á Alfonso Perez de Vive cumpla en vos lo que jurado os tengo
ro, con órden espresa de no volverse delante de Fernando que está aqui pre
sin traerlo consigo. Sente.
Acababa de salir el page, y estaba Entonces mandó á Juan de Luna y
aun alli Rivadeneira, cuando llegó el á Fernando de Rivadeneira que toma
obispo de Burgos con el objeto de ha sen á aquel perverso y malvado, trai
blar al maestre. En cuanto el maestre dor, criado suyo, y lo arrojasen de las
vió al obispo le preguntó qué era lo que barandas de la torre abajo.
habia declarado el fraile, y el obispo le Entonces Juan de Luna le descargó
contestó que nada habia podido sacar un mazazo en la cabeza, para evitar
de aquel fraile loco y sin sentido, sino que tal vez no quedase muerto al caer,
que habia obrado por revelacion de y pudiese revelar algo, y, para figurar
Dios, y que ninguna persona le habia que él mismo se habia caido al rio, des
inducido á ello. clavando la baranda de la torre al caer,
Entonces don Alvaro le contestó: juntos cayeron la baranda y el cadá
-Reverendo padre, hacedle pregun ver, deshaciéndose la cabeza en las pie
tar segun su hábito y refiere el derecho, dras del ángulo de la torre.
porque es escarnio decir que un fraile Para llevar adelante el fingimiento,
gordo, bermejo y mundanal, tuviese en el momento que cayó Alfonso Perez,
revelacion de Dios. para que la gente creyese que habia si
En cuanto se fué el obispo, y re do un caso desastrado y de desgracia,
D0N ALVARO DE LUNA. 23

bajaron inmediatamente por la escale Gran sentimiento fingió, y con gran


ra de la torre abajo Juan de Luna y Fer arte don Alvaro delante de todos, di
mando de Rivadeneira, dando voces y ciendo con el acento mas dolorido que
gritando: habia perdido su mejor servidor que
—¡Abajo, abajo! ¡á la calle que ha cai nunca tuviera ni esperaba tener, y que
do Alonso Perez de Vivero de la torre!!! aun cuando Alfonso Perez era muerto,
Mientras ellos bajaban se hallaba á á él le quedaba el doloroso, justo y gra
la puerta Gonzalo Chacon, camarero ve dolor y trabajo de su muerte. Aña
del maestre, y comendador de Montiel, diendo que en este dia habia perdido el
el cual recelando que se hubiese co pilar y la columna de sus hechos, de
metido alguna maldad contra su maes su casa y de su estado. Despues, vol
tre, echó mano á un puñal que tenia viéndose á los concurrentes, les decia
en el cinto y les dijo: con lágrimas en los ojos:
—Bajad vosotros si quereis, que á mí —Ved, señores, qué descanso me es
me mandó el maestre, mi señor, estar taba guardado para la edad en que es—
a(IUll. toy. En ese criado mio descansaban to
Salieron los dos caballeros alboro dos mis hechos, en él tenian reposo
tando por la calle, uniéndose con otra mis negocios, y yo por consiguiente
mucha gente que á aquella hora se ha con ellos.
llaba en la casa del maestre, para ver Despues, dejando de repente el llan
ué era lo que sucedia. No quedó na to, y como volviendo en sí, dijo:
¿ en la casa, escepto Gonzalo Cha —Empero, pues que no puede ser
con, y encontraron tendido en el suelo, otra cosa, demos gracias á Dios por to
desbaratada la cabeza contra una es do lo que hace, y estad seguros que
quina del puente de piedra que estaba tengo de mirar por Juan Vivero, hijo
junto á la casa, el cadáver de Alfonso de Alonso, por sus demas hijos y cria
de Vivero, cuyos sesos habian salpica dos, como si todos lo fueran mios pro
do las paredes. pios.
Mientras todos andaban revueltos Y envió inmediatamente á suplicar
en la calle, subió con la mayor preste al rey que concediese el destino de la
za Gonzalo Chacon á donde estaba don contaduría mayor á Juan Vivero, hijo
Alvaro, el cual, al verle, le dijo: del difunto, encargando á todos que
—¿Has visto, Chacon, qué milagro y fuesen á consolarle.
desventura para el pobre Alfonso Perez Don Alvaro de Luna representó per
de Vivero, que apenas llegó y cayó con fectamente, y como consumado actor,
una baranda estando arrimado á ella? su papel. Todavía lo desempeñó mejor
Anda, ve presto, por Dios, y hazlo me cuando despues de haber contado al
ter en una de esas casas por si se pue hijo de Alfonso de Vivero, los criados
de curar. y deudos de su padre, la tristeza que
Bajó Gonzalo Chacon á hacer lo que tenia don Alvaro por aquella desgracia,
su amo y señor le mandaba; empero, se presentó éste ante el maestre para
al ver que la casa estaba completa darle las gracias de su buena voluntad
mente sola, y que en aquel arreba y de los servicios que queria hacerle.
to y alboroto que andaba por la calle Entró el hijo de Alonso Perez de Vive
podria entrar algun criado de Alfonso ro en la cámara de don Alvaro de Luna
de Vivero, viendo á su señor muerto, y llorando, y el condestable mezcló sus
desmandarse y aun matar al mismo lágrimas con las suyas, y despues pro
maestre hallándose solo, creyó mas pru curó consolarle diciéndole, que si ha
dente permanecer en la casa guar— bia perdido un padre le quedaba otro,
dándole. porque él tomaba á su cargo á él y á
A poco de estar en el dintel de la toda su familia por respeto á su padre
puerta, volvieron Juan de Luna y Fer y á los muchos servicios que le había
nando Rivadeneira con muchas gentes, hecho; por tanto que se agregase á su
y contaron al maestre, que habiendo casa y le tuviese como un padre, por—
dado con la cabeza en la esquina del que en lo sucesivo lo seria para él, y
puente Alfonso Perez de Vivero, habia aun le daria mas para su acostamien
muerto instantáneamente. to que habia dado al mismo Alfonso de
24 CAUSAS CELEBRES.

Vivero, haciéndole muchas mercedes; tre, animaban y escitaban al rey para


y que habia ya escrito al rey para que que se decidiese á obrar contra él.
le diese la contaduría mayor como la Los amigos de don Alvaro, que se
tenia su padre. habian alarmado con la llegada de la
Engañado por el fingido dolor de gente al castillo de Burgos, le escita
don Alvaro, Juan de Vivero besó la ban á que se previniese, recordándole
mano del mismo que pocas horas antes el adagio vulgar: «á quien te quiere
habia arrebatado alevemente la vida á
matar, madruga y mátalo.» A punto
su padre, y protestándole su agrade de dar ya el golpe, arredróse el encar
cimiento, le dijo que si su padre le ha gado de darlo, Rui Diaz, el cual habia
bia bien servido, él no lo haria menos hecho juramento de homenage al maes
con todas sus fuerzas, y que las obras tre de guardarlo contra cualquiera que
lo acreditarian. fuese, y trató de retirarse de la córte;
Ya era muy entrada la noche cuan pero el rey le detuvo manifestándole
do se despidió el desgraciado hijo de que él tenia medios de que don Alvaro
Alfonso de Vivero, del maestre. Este se fuese á sus tierras.
mandó á Garci Sanchez, que era uno de Queriendo el rey quitar el miedo á
los criados de Vivero, que levantase el Rui Diaz, y tal vez el suyo propio, se
cuerpo de Alfonso Perez y le llevase á gun las cosas que por varias partes ha
enterrar á Valladolid en el monasterio bian llegado á su noticia, llamó al maes
de San Benito, donde tenia preparada tre, y en una larga conferencia que tu
su sepultura. vo con él, le hizo presente los males
Cuando acaeció la desgraciada muer que traia la envidia, los grandes peli
te de Alfonso de Vivero, se hallaba el gros á que en el trascurso de su vida
rey en la catedral en el oficio de tinie se habia visto espuesto, y que en el
blas del Viernes Santo, y al saber la estado en que se hallaba el reino contra
noticia de su muerte le pesó muchísi él, le parecia que seria muy convenien
mo de ella, no creyó ni por un momen te para él y para la seguridad de su
to fuese casual, y receló si tal vez an reino que se retirase á la vida privada
tes de morir Alfonso Perez de Vivero á descansar de tantos trabajos, protes
habria descubierto los tratos en que tándole sus sentimientos y su amor ja
con él andaba. más desmentidos para con él.
Al dia siguiente, Sábado Santo, muy Don Alvaro le contestó diciéndole
de mañana, don Alvaro de Luna, ves lo mucho que le maravillaba aquella
tido de luto rigoroso, fué á ver al rey órden, por la que le mandaba salir de
y á contarle la gran desventura que su córte, y la amargura que le causaba
habia acaecido en su casa por la im el juicio que contra él se formaba; pero
prevista muerte de Alonso Perez de Vi que estaba siempre pronto á obedecer
vero. Maravillado se mostró el rey, y sus órdenes, esperando todavía como
en su semblante no dejó ver alteracion una gracia el rodearle de personas adic
alguna ni enojo contra el maestre, aun tas y fieles para que no sufriese su ser
º en lo interior estaba persuadido vicio, haciendo que tuviese á su lado
de que no hubiesen pasado las cosas los mas leales prelados, grandes y ca
de la manera que se decia. Tampoco lo balleros, tanto mas cuanto que el rey
creyó el pueblo, antes vió, en el em iba á emprender un viage á Navarra, y
peño de propalar la casualidad de la en aquella comarca tenia grandes ene—
desgraciada muerte de Vivero, y en las migos y debia recelar de la conducta
grandes muestras de sentimiento que anterior que siempre habia observado
daba don Alvaro, cierta exageracion, y el monarca de aquel reino.
el deseo de ocultar un crímen. El rey, aunque sin ánimo de cum
El rey, en lugar de mudar del pro plirlo, concedió la peticion de don Al
pósito en que estaba de deshacerse del varo y le encargó que le propusiese las
condestable, se decidió á apresurar su personas que tuviese por convenientes.
ejecucion. Empezó el maestre á nombrarle al
No dejó don Alvaro de Luna de sa gunas, entre ellas al arzobispo de To
ber lo que pasaba, y todos los que an ledo, don Garci-Alvarez, Manrique, con
daban en la conjuracion contra el maes de de Castañeda, don Diego Furtado,
l)0N ALVARO DE LUNA. 25

hijo mayor de don Iñigo Lopez de Men to haciéndole ver que las gentes dirian
doza, marqués de Santillana, y algunos que habia ido huyendo por algun gran
otros caballeros y prelados y doctores error que hubiese hecho al rey. En mal
para el consejo. hora accedió don Alvaro á abandonar
En efecto, el rey escribió las cartas el proyecto que concibió de partir en
para ellos, y varios mensageros mar aquella misma noche, á pesar de que
charon con gran prisa á llevarlas. Gonzalo Chacon, ese hombre tan pru—
Al mismo tiempo que partieron los dente, le habia dicho que sabia á cien
mensageros para llamar á los que ha cia cierta que en el castillo habian en—
bia nombrado el rey para acompañar trado acémilas cargadas de pertrechos
le, mandó éste otro mensage para que y gentes de á caballo que no podia cal
se apresurasen las gentes de Zúñiga cular para qué serian, y que por tanto
á llegar á la ciudadela de Burgos. mirase lo que hacia.
Don Alvaro de Zúñiga, hijo del con Mandó el maestre á don Gonzalo
de de Plasencia, que estaba en Curiel Chacon que fuese á decir al rey lo que
con la gente con que se dirigia hácia sabia, y le encontró en el momento
Búrgos, obedeciendo las órdenes del mismo en que se iba á acostar para
rey apresuró su marcha. Supo en el ca dormir. Turbóse el rey al oir lo que le
mino la muerte de Alonso Perez, acae decia el comendador Chacon, y empezó
cida en la casa misma del condestable, á tartamudear un buen rato, sin poder
y tembló por él, porque conoció que acertar á formar una sola frase, y úni
sin duda habia sido el castigo del avi camente pudo, despues de un rato, de
so que antes habia dado á su padre el cirle que los que habian llegado eran
conde de Plasencia. Vaciló un momen para la defensa del castillo, y que á
to Zúñiga, pero obedeciendo á una nue la mañana siguiente él se veria con el
va y mas apremiante órden del rey, y maestre y dispondria lo que habia de
dejando la gente de armas encomen hacerse.
dada á Mosen Diego de Varela, que le Volvió Chacon con este recado á
acompañaba, andando de noche y con ver á su amo y señor, y no pudo éste
muchas precauciones, pudo llegar á a entonces menos de conocer, al sa
Burgos y meterse en el castillo. Poco er lo turbado que habia contestado el
tiempo despues, tambien logró Mosen rey, de que se tramaba alguna cosa
Diego Varela, á fuerza de ardides y ma séria contra él.
ña, introducirse en la fortaleza con su Mandó entónces el maestre á Fer
gente. nando de Sesé que le acompañaba tam
El obispo do Avila, don Alfonso de bien, que sin mas tardar hiciese ensi
Fonseca, que se mostraba muy solícito llar sus caballos y preparar su marcha;
aparentemente en favor del maestre, pero á punto de realizarla, otra vez la
era hermano de la muger del alcaide estorbó por su mal el bizarro Rivade
del castillo de Burgos. Asi, por éste neira, prefiriendo una defensa, y aun
trató de saber don Alvaro si estaba don una muerte heróica, á una evasion, so
Alvaro de Zúñiga dentro de Burgos, ó bre cobarde peligrosa. Despues éste,
dónde. El obispo sabia por su herma que vivia en una casa distinta de la
na todo cuanto pasaba, y era ademas del maestre, se fué á preparar sus
uno de los que entraban en la conju gentes.
racion para perder á don Alvaro; pero A poco de haberse ido, pasaron por
faltando á sus juramentos, preguntado la calle unos cantores que habian ve
por don Alvaro, le contestó que sobre nido de Francia, los cuales el maestre
su corona y sobre su cabeza le juraba aun no habia oido ni visto. A pesar del
que no habia entrado gente alguna en estado en que debia hallarse el ánimo
el castillo. del maestre, mostró placer en oir aque
Desconfiando cada vez mas don Al llas canciones y se puso á la ventana,
varo, no obstante del monarca, que le é hizo que los cantores cantasen un
daba pruebas de cariño aparentes, pen largo espacio de tiempo; y cuando fué
só salir en aquella misma noche de Bur la media noche, les dió generosamen
os; pero el intrépido Fernando Riva te una buena cantidad, y les mandó
eneira le hizo desistir de su propósi retirarse. 4
TOMO .
26 CAUSAS CELEBRES.

Era esta la noche del martes de Pas que habian despertado al maestre, su
cua de Resurreccion. El prudente Gon Señor.
zalo Chacon, alarmado del ánimo con que Respondió éste que abriesen, por
habia hallado al rey, y creyendo cer que queria decir al maestre como ve
cano el peligro de su señor, viendo que nian gentes de armas de hácia el alcá
la posada del maestre no tenia la gen CaZd I”.

te que requeria aquella situacion, pues Avisado el maestre, vistióse acele—


solo se hallaban en ella él, Fernando radamente con un jubon, y mandó que
Sesé, otro noble caballero que tenia la subiese Alfonso de Cartagena, el cual
custodia de la casa y las llaves, y que le manifestó que un tropel de gente ar—
se llamaba Diego Gotor, otro mancebo mada y con trompetas, y sin saber para
llamado Diego Cepeda, con unos diez qué, habia salido del castillo. Don Al
hombres de armas y dos ballesteros, varo le dijo que vendrian á la casa de su
determinó ir con Fernando Sesé á las padre Pedro Cartagena, porque era ju
diversas casas en que estaban aloja dío converso, y se habia sonado en el
das las gentes del maestre, y traerlos dia antes que los del castillo trataban
aquella noche á dormir á la posada. de saquear las casas de los conversos,
Lograron reunir asi hasta veinticinco y le mandó que fuese cerca de su pa
hombres. El maestre habia mandado, dre, que se defendiesen como hom
sin embargo, á Alonso Gonzalez de bres, y que él los socorreria con todas
Tordesillas, su secretario, para que hi sus fuerzas. Cuando estaban en esto,
ciese venir mas número de gentes para se presentó delante de la casa del
que durmiesen en su misma casa, en maestre el alcaide del castillo de la
su custodia; pero éste, que era un ciudad, don Iñigo de Zúñiga, á caballo,
traidor, no puso ningun cuidado ni dió con doscientos hombres armados y ba
el menor paso para ello. llesteros gritando: ¡Castilla, Castillal
Mientras estas disposiciones se to mueran los traidores!
maban en la casa de Pedro de Cartage Don Alvaro, creyendo que las puer
na, que era donde moraba el condesta tas de su casa estaban bien cerradas,
ble, el rey habia dirigido una cédula á se colocó en la ventana al lado de Gon
don Alvaro de Zúñiga, en la que le zalo Chacon y Fernando Sesé, y alzan
decia: do la voz, dirigiéndose á aquellas gen
Don Alvaro de Zúñiga, mi alguacil tes, les dijo:
mayor, yo vos mando que prendades el —Buenas gentes, ¿á qué venís? ¿A
cuerpo de don Alvaro de Luna, maestre qué venís hombres de armas? ¿Quié
de Santiago, é si se defendiese, que le nes sois? ¿Qué quereis?
mateis. Y estando arrimados ellos á la ca
En virtud de esta cédula, don Al sa, no respondieron, siguiendo gritan
varo de Zúñiga tomó sus disposiciones do: Castilla, Castilla mueran los trai
para ejecutar el mandato real. Apenas dores! Y al mismo tiempo uno de los de
se habia acostado y traspuesto el maes fuera arrojó un venablo que dió en el
tre, fatigada su alma con las encontra marco de la ventana.
das ideas que en ella se combatian, El condestable se retiró, y lanzán
cuando cerca del amanecer, Alfonso de dose con notable brio á una chimenea
Cartagena, hijo del dueño de la casa, co que habia en la sala, y donde ardian
menzó á llamar á grandes voces y alda varios leños, porque el tiempo estaba
bonazos á la puerta de ella, hasta que muy frio, cogió uno de ellos, lo que
se despertó el maestre. Llamó éste imitaron Chacon y Sesé, y los lanzaron
igualmente á grandes voces á Gonzalo sobre las cabezas de los hombres ar
Chacon y á Fernando Sesé, diciéndoles mados que habia á la puerta, dando
con aire enojado que viesen quién lla en ellos de tal modo y con tal fuerza,
maba á aquellas horas y de aquel modo. que los hicieron apartar de alli á bas
Entonces Fernando Sesé se asomó á tante trecho hasta donde no podian al
una ventana que estaba en la sala don canzar los leños encendidos.
de dormia, cerca de la cámara del maes Despues de esto, comenzaron á lla
tre, y habló á Pedro de Cartagena pre mar á Diego Gotor, que tenia el cargo
guntándole por qué daba tales golpazos de las llaves de las puertas, y á los de
D0N ALVARO DE LUNA. 27

mas hombres que se habian quedado fuerzo de don Juan, su hijo, de Fer
alli á dormir, los que estaban descan nando Rivadeneira, los cuales vivian
sando en diversas cámaras y tenian todos cerca y casi al rededor, y con los
cerradas las puertas por dentro; y era que viniesen en su socorro y los que
tal el sueño de que se hallaban posei consigo tenia poder romper por en me
dos aquellos hombres que tardaron mu dio de los contrarios hasta la casa del
chísimo en despertar. conde, su hijo, la que se hallaba á la
Aguardaba don Alvaro por momen espalda de la suya sobre el muro de la
tos ser socorrido por Rivadeneira, por ciudad, desde la que podria mejor de
su hijo don Juan, y por los demas que fenderse, ó irse si habia necesidad.
vivian cerca, pero lo impidieron las Nadie acudió á su socorro á causa
gentes del rey. Viendo que tardaban, del gran alboroto de la ciudad. Enton
trató de organizar como pudo la resis ces el maestre quiso hacer una salida
tencia con la gente que tenia. Los de para ir á la casa de su hijo; mas el al
fuera hubieran podido entrar desde caide del castillo con la gente de ar
luego porque el postigo de la puerta mas que traia se colocó de tal modo
estaba abierto; empero recelaban que que no pudiese pasar el maestre por
siendo un postigo estrecho se hallaba alli sin caer en su poder.
abierto á propósito para que á medida Trató entonces de hacer que Gon
que fuesen entrando cayesen sobre zalo Chacon trabajase para que se qui
ellos los que estaban dentro. Pedro de tase la gente que cercaba la casa, y
Cepeda se resolvió á salir para llegar los culebrineros y ballesteros de don
hasta su posada para avisar la gente; Alvaro, hicieron tan certeros y repeti
mas al ver el tropel de soldados que dos tiros contra los sitiadores, que les
habia delante de sí, se volvió y cerró hicieron cerrar las puertas de las casas
el postigo que estaba abierto. Creia el de enfrente, donde estaban. La puerta
maestre que tenia mas gente dentro de la casa donde vivia don Alvaro es
de su casa; pero al saber el corto nú taba enclavada con una gran tranca, y
mero de los que habia, no decayó la Gonzalo Chacon la desenclavó para sa
grandeza de su ánimo. lir por ella con el maestre. Pero á los
Gonzalo Chacon y Fernando. Sesé golpes que se daban para desenclavar
cogieron dos ballestas é hicieron va la tranca, los contrarios sospecharon
rios disparos, tan certeros, que mata que iba á verificarse una salida de don
ron á muchos de los sitiadores. Un Alvaro y las gentes que tenia
escudero, que se llamaba Alfonso Ga y entonces abrieron la mitad de las
llego, hizo un tiro con una culebrina puertas de las casas donde se habian
que mató tambien á uno de los hom— refugiado.
bres de armas que estaban al lado de Gonzalo Chacon llamó entonces á
Zúñiga. un ballestero, y le mandó tirase sobre
º ver los sitiadores que dentro de un caballero que se hallaba á caballo y
la casa del maestre habia ballestas y que parecia ser el gefe de los sitiado
culebrinas con las que traspasaban los res, creyendo Chacon que era el mis
arneses, retiráronse á las casas inme mo don Alvaro de Zúñiga. El balles
diatas de enfrente, y entornaron las tero hizo su tiro con tal exactitud y
puertas de ellas para evitar los tiros. tino, que el caballero cayó la cabeza
Entonces dieron lugar á que los hom sobre la del caballo que montaba, ha
bres de armas que habia dentro de la biéndole pasado la ballesta el brazo iz
casa del maestre se armasen y que los quierdo, á pesar de tenerlo cubierto
ballesteros y culebrineros aderezasen con una armadura de acero.
sus ballestas y culebrinas. Al ver caer á uno de sus gefes, los
El maestre queria lanzarse á la ca sitiadores se refugiaron inmediata
lle con las gentes que tenia para esca mente tras de las puertas, y las gentes
par; empero considerando que tenia de don Alvaro de Luna se regocijaron
pocos consigo y que eran muchos los creyendo que el quehabia caido era don
contrarios, lo que le pondria en un in Alvaro de Zúñiga y que habia muerto
minente peligro, desistió de salir. Ade del golpe. Pronto se desengañaron por
mas, esperaba de hora en hora el re que don Alvaro se presentó en lugar
28 CA USAS CELEBRES.

del ginete que habian derribado, y se parte y á otra; pero habiéndose adelan
juntó con las gentes que con el prime tado algun tanto en el andar, don Al
ro estaban. Viendo don Alvaro la im varo, recelando tal vez alguna traicion
posibilidad de hacer una vigorosa sali indignado sobre todo al verse huir co
da con la poca gente que tenia rom mo un cobarde por sitios tan sucios,
piendo por entre los sitiadores, que de se volvió del camino que llevaba, di
momento en momento se aumentaban, ciendo á Alfonso de Cartagena que mas
entró en su cámara, en la cual habia queria , morir con honra que salvarse
una ventana, que daba á otra calle á andando por albañales escondidos co
espaldas de su casa, y mandó que se mo hombre bellaco y de ninguna con
¿n todas las piedras que se pu dicion. Por tanto que se fuese á la bue
diesen reunir sobre ellas. Pocas pie na ventura desde alli y dijese al conde
dras habia en la casa; pero hízose aco su hijo, á Juan de Luna y á Fernando
pio de ellas levantando las de un patio Rivadeneira que se apresuraron á es
que estaba empedrado, y colocaron es caparse y salvarse lo mejor que pu
tos montones de piedras en las venta dieran.
nas y en los corredores que se halla Volvióse don Alvaro solo á la casa
ban en lo alto de la casa. de donde pocos momentos antes habia
Trataba de defenderse desde ellas salido, y halló á Fernando Sesé á la
don Alvaro, esperando todavía ser so— puerta donde habia quedado, entraron
corrido por los suyos. En este estado, y la cerraron nuevamente.
sus buenos criados y amigos, Gonzalo Al ver Gonzalo Chacon de nuevo en
Chacon y Fernando Sesé, le instaron la casa á don Alvaro, arrancábase los
repetidas veces para que huyese del cabellos de dolor, porque veia el pe
gran peligro en que se hallaba y salie ligro inevitable en que habia venido á
se disfrazado acompañado de Alfonso de meterse de nuevo su amo y señor. En
Cartagena, hijo del dueño de la casa en seguida armóse de su arnés y comenzó
que moraba. Largo tiempo resistió don á esforzar y á animar mucho mas que
Alvaro el verificarlo, porque su alma al principio á la poca gente que alli
se revelaba á la sola palabra de huir estaba. Entónces vió desde una ven
de un peligro. Pero apremiado por las tana, venir una porcion de gentes de
repetidas instancias de sus servidores armas y delante de ellos tres criados
y por las seguridades que le daba Alfon del maestre, los cuales eran, el hijo
so de Cartagena marchóse secretamen de Alfonso Perez de Vivero, Garci-San
te con él, sin que lo apercibieran nin chez de Valladolid, y algunos otros
guna de las gentes que habia en su ca mas, pensando que las gentes de don
sa, por una puerta escusada que daba Alvaro de Zúñiga se habian apoderado
á un corral, y del corral se salia cerca ya de la casa del maestre.
del rio por medio de las tenerías y al Gonzalo Chacon bajó á la puerta
bañales. Iba el maestre disfrazado, cu para ver y conocer qué gente era aque
bierto con una coraza ordinaria y una lla, é hizo abrir el postigo de la puerta
espada, y embozado en una capa para principal, dejando junto á él á Diego
no ser conocido. El comendador Cha— Gotor, Pedro Cepeda y otro hombre
con, siempre previsor, despues que sa de á pie. Salió Gonzalo Chacon él mis
lió don Alvaro, hizo que permaneciese mo á la calle armado con coraza y una
en la puerta escusada Fernando Sesé, daga, y cuando conoció la gente que
porque podria suceder que el maestre era, trató de meter en la casa á aque
volviese y encontrase la puerta abierta llos tres criados y los mas que pudiera,
en este caso. Gonzalo Chacon volvióse lo que logró quedándose él por dentro
à dar disposiciones de defensa en la de la puerta junto al postigo. En cuan
casa, y hacer de modo que nadie echa to Garci-Sanchez vió que habian entra
se de menos al maestre, animándolos y do los demas, siguió él en pos de ellos,
esforzándolos lo mejor que podia con que serian hasta unos trece hombres;
buenas palabras. mas al tiempo que estos iban entrando
Entretanto el maestre marchaba los iban desarmando por gentes de
silencioso detras de Alfonso de Carta dentro y encerrándoles en un cuarto
gena, que iba mirando azorado á una por mandato del maestre que estaba
D0N ALVARO DE LUNA. 29

alli presente. Precaucion bien tenida de Mendoza y el obispo de Burgos, fue


por la intencion con que venian, y sin ron recibidos por el maestre cortés y
embargo de la cual fueron respetados. afablemente en el mismo postigo de la
Estaba ya próximo el amanecer, y el puerta. Manifestáronle que el rey les
rey se habia ido á la plaza que llaman enviaba para que se entregase preso
de las Carnecerías en Burgos, rodeado por cuanto esto convenia á su servicio
de mucha gente y con un pendon, ha y al de su reino. Don Alvaro, dirigién
biendo dado órden á los regidores de dose á Rui Diaz le dijo:
la ciudad para que todos se aproxima —Rui Diaz; ¿es cierto que el rey mi
sen á él armados. señor me envia á decir eso que me
Mandó el rey un faraute al maestre, decís?
el cual le intimó que se entregase. El Y Rui Diaz le contestó:
maestre le dijo que estaba dispuesto á —Si por eierto, señor.
obedecer en todo la voluntad del rey, El maestre le replicó que se halla
y le pidió seguridad para sí y los su ba maravillado de que el rey, sabien
yos, y rogándole le enviase algunos do los servicios que le habia hecho,
caballeros de su casa y de su consejo, de los que todo su reino podia dar tes
para que con él hablasen. timonio, y por lo que tan agradecido
Volvió el faraute al rey y le con se habia mostrado siempre, ahora se
tó la respuesta que le habia dado el hallase tan indignado contra él. Pidió
maestre, y habiendo sabido el rey que don Alvaro un seguro para sí y para
el maestre no habia salido de su casa, los suyos, prometiendo ir á ver al rey
se puso muy contento porque todos á asegurarle de su obediencia y hacer
creian que aprovechando la oscuridad lo que le mandase.
de la noche se habria escapado de El obispo le contestó que no debia
Burgos. Sin embargo, mandó nueva pedir ahora aquel seguro porque el rey
mente al faraute que volviese á verá se hallaba muy enojado con él, y que si
don Alvaro para preguntarle qué ca iban con aquella demanda se aumenta
balleros ó personas queria que fuesen ria mucho mas su enojo.
á tratar con él, y que procurase ente Entonces don Alvaro incomodado
rarse bien de si¿ en Su casa, con las espresiones del obispo, le dijo
mandando entretanto estrechasen la con bastante desden:
circunvalacion. —Obispo, callad agora vos, y no os
Volvió el faraute para saber qué cureis de fablar donde caballeros fa
caballeros ó personas queria que fue blan; cuando fablen otros de faldas
sen á hablar, y qué clase de segurida luengas como las vuestras fablareis
des exigia; y don Alvaro lo dejó á su entonces vos, é non cureis de mas al
voluntad, dando para los que viniesen tercar, ¿ que con Rui Diaz he fa
á tratar con él un seguro que seria fiel blado é fablo con él y no con vos.
y lealmente respetado. Diputó el rey Quedó el obispo avergonzado y con
al obispo de Burgos y á don Rui Diaz temor, y marchóse con Rui Diaz é hi
de Mendoza para que hablasen con él. zo presente al rey la peticion del
Entretanto hizo el maestre que el dies maestre.
tro y buen Gonzalo Chacon subiese á Accedió desde luego el rey á que
la torre, donde pocos dias antes se ha se diese el seguro, si bien andaba dis
bia verificado la catástrofe de Alfon putando sobre los términos en que de
so Perez de Vivero, é hiciese señas á bia estenderse; por último, lo juró en
los de la casa inmediata, donde estaba manos del obispo de Burgos que llevó
el conde su hijo, para ver si éste se el seguro asegurándole la vida en el
habia podido poner en salvo. Por me momento en que viniese con don Rui
dio de señas, porque las voces no era Diaz de Mendoza y don Perafan de Ri
fácil oirlas por la grande gritería y ba vera, adelantado de Castilla, á presen
rahunda que habia en las calles, supo tarse al rey.
¿ el conde se habia puesto en salvo Los términos del seguro que el mo
isfrazado de muger con un criado su narca habia jurado eran terminantes y
yo, llamado García Gallego. concebido en estos términos: «Que el
Los enviados del rey, don Rui Diaz »rey le aseguraba por la fé real, por él
30 CAUSAS CELEBRES.

»y por cuantos con él eran á la sazon, desma que se hacia á su hijo don Pe
»y por todos los de su casa y córte dro, de que tampoco habia tomado po
»los que le acompañaban, que le reci sesion, para que de todo hiciese el rey
»bia en su seguro, asegurándole de lo que creyese mas conveniente.
»muerte, de lesion y de prision, asi á Dejó tambien alli sobre una mesa
»él como al conde don Juan, su hijo, á los juramentos de homenage que le ha
»don Juan de Luna, á Fernando Riva bian hecho Rui Díaz de Mendoza, el
» deneira, á Gonzalo Chacon, á Fernan obispo de Burgos y los condes y caba
»do Sesé y á todos los demas criados lleros de Castilla de defenderle, am
»suyos, y asimismo sus bienes y hacien pararle y ayudarle guardando su per
»das; todo esto si el maestre viniese sona, estado y honor contra todas las
»con don Rui Diaz y el adelantado don personas del mundo, juramentos y pro
»Perafan de Rivera, y haciendo lo que testas que cumplian de la manera que
»el rey le mandase sin contradiccion vemos, y que no habian sido mas que
» alguna, le seria guardado todo aque otros tantos lazos para hacerle irá Bur
»llo de la manera que el maestre lo gos y ocasionarle en aquella ciudad su
»pedia.» Firmó el rey y selló el segu perdicion.
ro con su sello real, y asi se lo mandó Hecho esto, cual si ninguna espe
al maestre. El prudente Chacon instó ranza tuviese de salvacion, por cono
todavía al maestre para que no saliese, cer el carácter del rey y su condicion,
recordándole los seguros, juramentos mandó con una serenidad sin ejemplo
y fé tantas veces quebrantados por el en aquel terrible trance, traer los man
rey, que todo lo prometia para asegu teles, porque ya era hora de comer, y
rarle, y le animó á que muriese antes colocarlos sobre tres arcas llenas de
de entregarse prisionero. El maestre oro, poniendo las unas encima de las
le contestó: otras en medio de la estancia, y man
—Nunca quiera Dios que al cabo de dando traer los manjares mas esquisi
mis dias, el mas leal, el mas honrado tos y regalados que tenia en su des
caballero, mayor servidor que sin co pensa, provista de los mejores vinos
rona ha sido en su tiempo en todas las que habia entonces en España. Mandó
Españas, agora casi en fin de sus dias, á Gonzalo Chacon, Fernando Sesé, Die
dejase tal nombre peleando contra su go Gotor y Pedro Cepeda, los cuales
rey y señor, y dejase tal sepultura á eran todos hombres buenos y de hon
sus hijos y á los descendientes suyos, rado linage, que se sentasen á comer
peleando contra la voluntad del rey, con él, lo cual rehusaron al principio
contra los suyos y contra su pendon aquellos fieles servidores. Hablóles du
real. Añadiendo despues: «Haga Dios rante la comida, cual en el duro tran
y el rey de mí lo que les plazca, que ce de la muerte puede un padre hablar
yo por cierto no haré otra cosa sino po á sus propios hijos. Concluida la comi
nerme en sus manos. El rey mi señor da, mandó que fuesen á comer sus
me hizo y puede deshacerlo si quiere.» criados y los demas que á aquella hora
Ya con estas disposiciones de áni se hallaban en su casa. Terminada que
mo se retiró á su cámara y empezó á fué la comida de los criados, mandó
ordenar tranquilamente todas sus co que el comendador Gonzalo Chacon
sas, cual si fuese á morir. Mandó traer abriese las arcas del dinero, á fin de
todo el oro que tenia en moneda, su que si el rey queria disponer de él, le
plata, la vagilla, las joyas, las cosas de quedase todo, pues lo habia ganado en
mas precio y valor, y los papeles que su servicio y queria asi satisfacer y
consigo traía. Quemó los memoriales aplacar su conciencia.
de sus deudores, y entre los papeles Al ver Gonzalo Chacon la buena vo
encontró la escritura y las bulas de la luntad del maestre que queria dejar
renuncia del maestrazgo que hacia en aquel tesoro al rey, le hizo presente
su hijo el conde don Juan, y que ya es que bueno era lo que tenia pensado,
taba aprobada por Su Santidad, y tam pero que mirase tambien por sus cria
bien la cédula del ducado de Trujillo, dos que se habian hallado con él á su
de que aun no habia tomado posesion, lado, que por él , lo habian arriesgado
y la de la merced del condado de Le todo, hasta la vida, y que podrian ser
D0N ALVARO DE LUNA. 31

vir, recompensándoles, del mismo mo: á fin de que con ellos no se pudiese co
do á sus hijos, con la misma voluntad meter, ninguna maldad mi felonía. El
que á él habian servido. resto del oro que ¿ lo dejó den
Convencióse don Alvaro de la fuer tro de las arcas, las cerró con llave,
za de este razonamiento, y mandó que que entregó á Pedro de Céspedes para
le trajesen seis talegones de doblas, é que se las diese al rey con cuanto en
hizo que vaciasen cuatro en un gran ellas quedaba. A Gonzalo Chacon le en
banco que alli estaba, y llamando uno cargó que llevase consigo las gentes
á uno á los criados que habia en la casa, que habia dentro de la casa, para que
repartió entre ellos aquellas doblas, no recibiesen daño alguno, y los fue
acompañándolas de buenos consejos y se á poner á salvo en la casa del con
de palabras de afecto. de don Juan.
Terminado esto, dió á Fernando Inmediatamente despues se puso á
Sesé y al mismo Gonzalo Chacon, á ca escribir, porque ya presagiaba su muer
da uno de los dos, dos talegos de do te, un memorial en el que esponia los
blas de oro, conteniendo cada uno de grandes servicios que habia prestado
ellos hasta dos mil. al rey, é imploraba sin creerse culpa
Gonzalo Chacon dijo á don Alvaro ble, su clemencia; y despues, reser
que para qué le daba aquello, que si vándose únicamente para su compañía
pensaba hacerle con ello una merced ó los dos pages mas jóvenes, y armado
daño. Don Alvaro le respondió: de un arnés precioso que le habia re
—Os lo doy porque no os puedo dar galado el rey de Francia, montó en su
mas, para que los podais , llevar con mejor caballo, entregando á Chacon el
vosotros, y que si os guardan el segu seguro para que sirviese á todos los
ro que el rey me ha dado, los demas suyos. Se despidió tiernamente de to
criados mios que acudan á vosotros les dos, los cuales desolados y sollozando
hagais todo el favor posible, y los lle querian correr su suerte.
veis al lado de la condesa, mi muger, Al ir á salir por la puerta de su ca
y el conde mi hijo, y Dios quiera que sa, los dos caballeros, Rui Diaz y Pe
alli llegueis. rafan, que habia comisionado el rey
Gonzalo Chacon le manifestó que con para su seguridad, escusáronse de sa
aquel dinero los perdia, porque aquel lir con él á pretesto del riesgo que
oro solo seria causa para perder su vi corria por la indignacion popular que
da por robárselo. contra él habia, no teniendo ellos bas
En aquella lucha de desinterés y tante fuerza ni prestigio para calmarla
generosidad, porfió tanto don Alvaro y desvanecerla. El animoso don Alva
con Fernando Sesé y Gonzalo Chacon, ro porfiaba diciendo que ningun peligro
que tuvieron estos que rendirse, y to le detendria, que iba á ir á donde el
maron aquel oro, y como iban armados rey estaba; pero viendo que no querian
de todas piezas, salvo la armadura de acompañarle, supuso que no se lo ha
las cabezas, entregaron los talegos á bria mandado el rey.
dos criados suyos para que lo guarda Chacon le instó y rogó, con el amor
sen, no habiendo tardado mucho tiem de un hijo, para que no se espusiese
po en perderlo, como veremos muy á algun insulto de un bellaco. Enton
pronto. ces se decidió á esperar á ¿ se apla
Hallábase vacante la encomienda de case el tumulto, recomendando á los
Usagre de la órden de Santiago, y el caballeros que hiciesen presente al rey
maestre la confirió en aquel mismo mo como él iba á salir para cumplir sus
mento á uno de sus servidores, que se mandatos, y que por él no habia que
llamaba Alvarado. Aquella fué la últi dado el ir á donde él estaba.
ma encomienda que proveyó, el último Entregado ya don Alvaro, el rey
actO ¿? como gran maestre de la ór quiso ir á comer el mismo dia, 4 de
den de Santiago ejerció don Alvaro de abril de 1453, á la misma casa de Pe
Luna. dro Cartagena en que se hallaba el con
Asi que lo hubo terminado, pidió destable. Asomado estaba éste á una
sus sellos y un martillo, y por su pro ventana, cuando vió llegar al rey con
pia mano los destrozó é hizo pedazos, el obispo de Avila, que creia haber te
32 CAUSAS CELEBRES.

nido una gran parte en lo que le esta siguiese sirviéndole bien, aun cuando
ba sucediendo. le mandó volver á la cárcel.
—Por esta cruz, don obispillo, dijo En tanto, Juan Fernandez Galindo,
formándola con los dedos en la frente, con el hijo de don Alvaro, se habia di
que me la habeis de pagar. rigido á la fortaleza de Portillo. Al lle
—Señor, juro á Dios, le contestó el gar al castillo, pidió al alcaide algun
obispo, y á las órdenes que recibí, que inero para el camino y para poder
tan poco cargo tengo en esto como el vestir al conde que seguia disfrazado;
rey de Granada. pero el alcaide, viendo la desgracia de
Intentó hablar al rey don Alvaro; don Alvaro, dijo que nada tenia, al
pero se negó aquel constantemente, zándose de este modo con aquel de
mandándole á decir que él mismo en pósito sagrado, y tuvieron que conti
otro tiempo le habia aconsejado que no nuar su camino en medio de mil pri
hablase nunca con persona á quien vaciones y trabajos hasta Escalona pa
mandase prender, y encargó entonces ra reunirse con la condesa su madre.
la custodia de su persona á Rui Diaz de El condestable solo tenia algunos
Mendoza, su mayordomo mayor, cosa guardias y no muy estrecha prision;
que maravillóá muchos, y que se miró asi es que escribia cartas á Chacon, y
como un agravio hecho á don Alvaro de á la condesa, á don Juan y don Pedro
Zúñiga, que era el que habia ejecutado de Luna, sus hijos, para su hermano
ision
con su gente esponiendo su don Juan de Luna v el traidor alcaide
V1013. de Portillo, que se habia alzado con los
Quedó el maestre prisionero en su caudales.
misma estancia, separándole de todos Trató de escaparse, y no halló otro
sus criados y no dejándole mas que dos medio mejor que salir por una venta
pages pequeños, llamado el uno Alfon na; pero tuvo que confiar este proyec
so de la Adrada, y el otro Morales. Los to á los pages, y uno de ellos, el Mo
demas criados fueron presos y llevados rales, le vendió villanamente.
á la cárcel pública, entre ellos el pru Viendo frustrado su plan, avisó á
dente Gonzalo de Chacon y Fernando don Fernando Sesé para que persua
Sesé, habiéndoles antes desarmado y diese á don Alvaro de Zúñiga que cuan
robado el dinero que pocos momentos do el rey se marchase de Burgos le re
antes habian recibido de la generosa clamase, y que le daria en casamiento
mano de su señor. El conde don Juan, á su hijo el conde don Juan para su hi
su hijo, habia escapado con un solo ja, y una hija para otro hijo del mis
criado, como hemos dicho, disfrazado mo; y obraba asi porque temia á Rui
de muger, y en el camino encontró á Diaz como caballero muy cobarde. Zú
un caballero, don Juan Fernandez Ga ñiga lo pidió al rey, alegando su carác
lindo, que iba en busca del maestre con ter de Justicia mayor de Castilla; pe
treinta caballos, y que acompañó al ro nada pudo conseguir.
hijo hasta Escalona, donde estaba la con Redoblada la vigilancia con don Al
desa. Juan de Luna salió disfrazado de varo, se acordó su traslacion á la for
clérigo, y Fernando Rivadeneira, este taleza de Portillo, confiando su guarda
hombre intrépido que con su mal con y custodia al hermano de Rui Diaz, el
sejo habia puesto á don Alvaro en aquel Prestamero. Iba don Alvaro de Luna
funesto trance, permaneció escondido en una mula sin arma alguna, lleván
en casa del obispo de Avila, hasta que dole por caminos estraviados. Supo en
pudo darle libertad. el camino que venia el arzobispo de To
La misma noche de la prision de ledo á ver al rey, y creyó que en aten
don Alvaro, mandó el rey venir á Gon cion á ser pariente suyo y hechura suya,
zalo Chacon desde la cárcel pública en vendria á rogar por él; y tan fiado es
que estaba para preguntarle dónde te taba de su amistad, que mandó á sus
nia el condestable los tesoros, y en vez criados cuando le prendieron que lle
de contestar á su pregunta, este fiel vasen el conde su hijo, aunque no qui
criado habló con tanto celo y tan bien siera la condesa, al arzobispo, que fué
en favor de su amo, que no pudo el rey uno de tantos ingratos como encuen
contener las lágrimas y le recomendó tran los hombres en la desgracia. Se
D0N ALVARO DE LUNA. 33

mostró uno de los mayores contrarios trigo, teniendo que hacerlo los mas
del condestable, y para no hallarlo del de cebada y legumbres. Asi entre
en el camino varió la direccion que las tropas que sitiaban á Escalona ha
traia. bia gran necesidad y miseria, quedan
El rey habia salido de Burgos acom do reducidas á tan escaso número que
pañado de Rui Diaz. Se dirigió á Por no pudieron tomar la plaza.
tillo, que inmediatamente fué entre Visto que no habian podido tomará
gado por el traidor alcaide. Pidióle el Escalona, el rey se retiró á Fuensalida
rey el tesoro del maestre, y aquel se y en una sala baja de la casa en que
lo entregó partiendo con él lo que ha moraba, reunió á los que le rodeaban
bia dentro de las arcas, si bien estas en consejo, en el cual no habia ni un
se hallaron considerablemente cerce solo amigo de don Alvaro, y les pidió
nadas porque con astucia habian levan parecer. Manifestáronle estos que don
tado el suelo de los cofres y sustraido Alvaro se hallaba apoderado del reino:
de ellos gran cantidad. Despues de la que tenia muchas villas, fortalezas y
salida del rey, entró preso en Portillo castillos; que era muy amado y temido
don Alvaro de Luna. de todos los suyos; que creerian que
El fiel Chacon, que con tanto teson podia volver á la gracia del rey, y que
habia dejado de decir al rey donde para evitarlo y que el rey pudiese to
estaban los tesoros del maestre, que mar sus fortalezas convenia quitarle la
riendo hablar con éste, y valiéndose vida; único medio de anular su inmen
de la prudencia y astucia de que tan so poder, porque si no todos sus par—
tas pruebas habia, dado en favor del ciales imitarian el ejemplo de Escalo
maestre, pidió hablar al rey en Due na, pues que don Alvaro tenia cuatro
ñas, y llevado á su presencia, le dijo, mil lanzas, veinte mil vasallos, sesenta
ue si él pudiese hablar con el con y tantas villas, fortalezas y señoríos.
¿ averiguaria donde tenia los De tal modo pintaron los enemigos
tesoros y se lo manifestaria al rey. de don Alvaro al monarca la necesidad
Prometióle éste que le hablaria si ju de concluir con este hombre, ante
raba no decirle mas que lo que le man quien habian temblado, y únicamente
dara. Resuelto á todo, Gonzalo Cha habian preso faltando los nobles de
con, por servir á su buen amo, juró; Burgos al juramento que habian hecho
pero sin duda receloso el rey, no per de defenderle, y el rey jurando en fal
mitió que se llevase á efecto esta en so y mintiendo el seguro que habia da
trevista en que el prudente servidor do, que condescendió desde luego en
trataba de proporcionar medios de que se hiciese un simulacro de forma
evasion á su desventurado amo. cion de causa.
Desde Portillo se dirigió el rey á No se cometió la formacion de esta
Maqueda; pero la defendia el valiente causa al consejo de Castilla, como han
don Fernando Rivadeneira, el cual co dicho algunos autores, y como parecia
mo caballero de prez y de valor y per corresponder, sino que nombró el rey
sona que queria muchísimo al condes doce individuos, de los cuales algunos
table, la defendió con el mayor valor, ni aun eran letrados, y todos ellos es—
no pudiendo el rey tomar la forta ¿? el arzobispo de Toledo que se
eza le pregonó como traidor, y enton salió del consejo por no permitirle su
ces despues de un pacto solemne en carácter votar la muerte, y el doctor
tregó la villa y su castillo. Juan Rodriguez, á quien se le quitó la
Desde alli se dirigió el rey á Esca— villa de Babilafuente porque no quiso
lona con su gente, donde se hallaba la firmar la sentencia que se dictó contra
condesa, el conde su hijo, y muchos don Alvaro, opinaron porque debia de
caballeros, y la puso sitio por veinte imponérsele la última pena.
dias, sinpodelº tOmar. Don Fernando Diaz de Toledo, el
Era esto en el mes de junio, y aquel relator de aquella especie de tribunal
año habia habido tanta escasez de pan improvisado, tribunal irregular que no
que murieron muchas personas en tenia ninguna jurisdiccion sobre la
Castilla de hambre, y eran muy pocas persona de don Alvaro de Luna que
las que en las llanuras comian pan de reunia el carácter eclesiástico como
- TOMO I, 5
34 CAUSAS CELEBRES.
-

maestre de Santiago, se presentó al en ella: Que el rey no osaba hacer cosa


rey y le dijo: alguna, salvo lo que el dicho condesta
—Señor, por todos los caballeros y ble queria y mandaba; ni queria comer
doctores de vuestro consejo que aqui sino lo que el condestable le daba:
son presentes, y aun creo que lo mis Que el condestable parecia el rey, y el
mo harian todos los ausentes, visto y rey condestable ó, criado suyo: òn Su
conocido por ellos los hechos y cosas Alteza no cataba, ni tenia otra cosa,
cometidas en vuestro deservicio y en salvo el comer, acatando todos al dicho
daño de la cosa pública de vuestro condestable como á señor; sin tener el
reino por el maestre de Santiago don rey otra cosa, salvo el nombre. Que el
Alvaro de Luna, y que ha seido usur— rey compró un caballo en Salamanca
pador de la corona real, é ha tiraniza por cien doblas, y suplicándole despues
do y robado vuestras rentas, hallan de algunos dias el vendedor que se lo
que por derecho debe ser degollado, y mandase pagar, le dijo que tomase su
despues que le sea cortada la cabeza y caballo, porque él no tenia con que pa
puesta en un clavo alto sobre un ca garlo: Que muchas veces pasaba el
dalso ciertos dias, porque sea ejemplo condestable por delante del rey sin
á todos los grandes de vuestro reino. quitarse el sombrero, y que paseando
Inmediatamente que el rey oyó la á caballo con Su Alteza iba igual con él:
sentencia firmó; y por cartas—patentes Que el condestable dió una vez al rey
dirigidas á, Diego de Zúñiga, mandó con el codo, y en modo de saña: Que
que condujese al preso á Valladolid no se entregó Atienza porque el maes
con buena escolta para que tuviese tre alzó el real, tocando sus trompetas
efecto la ejecucion. El mismo consejo indignado de que el rey no le quiso
arregló la especie de pregon que debia hacer merced de aquella fortaleza, y
de darse cuando fuese conducido al asi se tuvo que retirar desairado: Que
cadalso don Alvaro de Luna. - cuando el maestre salia de palacio ape
Este simulacro de proceso, en el nas quedaba persona para asistir al
que ni fué oido, ni citado, ni se hizo rey, y que cuando él cabalgaba le se
comparecer al reo, no comprende sino guian á caballo mil personas: Que ha
cargos vulgares y generales; ni hay cia estar separada del rey á la reina,
probanzas mas que de oidas, muy lige porque ella no le estorbase el mandar;
ras, de mugercillas y hombres de poco y que una vez que ella sin licencia del
valor, y todos testigos únicos y singu condestable vino á Valladolid y le ne
lares, y para probar artículos de poca gó la mano, él se la tomó por fuerza,
ó ninguna importancia. - pero ella no le quiso hablar, y él se sa
¿ de las fuertes presunciones lió de palacio muy enojado diciéndola:
sobre la muerte de don Alfonso Perez «Yo os casé, yo os descasaré:º Que un
de Vivero, corroboradas por las decla testigo oyó decir á un fraile de hábitos
raciones del page don Francisco Mal blancos cómo él habia pedido por mer
donado sobre la insistencia que mostró ced al rey que le diese un anillo de oro
don Alvaro en que, cuando fué á lla que traia en un dedo de la mano, y re
marle, no se volviese sin traerle con licando el rey, «No puedo, que tengo
sigo el dia de la catástrofe, referíase echo juramento al condestable, que
en este proceso que paseando una vez me lo dió, de nunca le sacar del dedo,»
y que el fraile dijera: «Yo tomo ese ju
el rey en una sala de Miraflores con el
maestre parecian hablar enojados; que ramento sobre mi corona»; y que en
el condestable echó las manos á los petonces el rey le dió el anillo, que el
chos del rey, miró á la daga, y aun fraile hizo pedazos diciendo: «Veis
puso la mano en ella; que el rey se aqui»: y le mostró dentro del anillo al
demudó, y se dirigió á él diciéndole: mismo rey pintado en una jaca, y que
«¿Qué os parece, condestable, de la el dicho rey la estaba besando por de
muerte de Alonso Perez de Vivero que tras: Que tenia el condestable en una
vos habeis hecho?» El condestable le redoma un enemigo y espíritu familiar
respondió: «Voto á Dios que si otro el cual le daba todas las cosas que ha
me lo dijera, cien dagadas le diera con bian de ser, y que asi estaba Su Alteza
esta dagal» y entonces puso la mano sin su libre poder: Que tal vez porque
D0N ALVAR0 LDE LUNA. 35

el rey mandó dar una ropa suya á un ca tradizo con el maestre que lo conocia
ballero, le dijo el condestable: «Renie bien; que desde alli con él se volviese
go de la mala hembra que me parió si á Valladolid, y en la conversacion le
en este año vistiéseis otra tal,» asi comunicase con gran secreto como le
volvió las espaldas, y se fué á su posa llevaban á dar muerte, porque los que
da: Que dió el arzobispado de Toledo á iban por él no le habian de comunicar
don Juan de Cerezuela, hermano suyo nada, segun se habia acordado en el
por parte de madre, persona de poco consejo, mas si no que el rey le man
saber y sin letras, y el arzobispado de daba pasar á Valladolid.
Santiago á don Rodrigo de Luna, su El condestable salió de Portillo con
sobrino, el cual era muy mozo y apren la gente que venia á buscarle, si bien
dia gramática en Avila á la sazon como le llamaba la atencion y le hacia sos
dijo un testigo, bien que otro le con pechar su traslacion á Valladolid, no
tradice afirmando que el don Rodrigo obstante el seguro firmado que tenia
se hallaba en Salamanca y á cargo de por el rey.
un bachiller en el estudio, y que en En el camino encontró al padre Al
tonces seria de diez y ocho á veinte fonso Espina, que se llegó á saludarle
años, sin letras, y que apenas sabia como conocido que era del condesta
las partes: Que robaba las rentas reales. ble. Las gentes que custodiaban á don
Con estos fútiles y mal probados Alvaro se apartaron para que pudiese
artículos, sobre todo siendo algunos de conversar libremente con el religioso.
ellos inverosímiles, y fundados en vul Entonces éste le participó con la
gares hablillas, se decidió la suerte del mayor prudencia su desgracia, y el ob
que por mas de cuarenta años habia jeto fatal con que era conducido á Va
llevado sobre sus hombros el peso de lladolid. -

la monarquía castellana. Apenas habia oido lo que le decia


El rencor de los enemigos de don el venerable religioso, cuando don Al
Alvaro quedaba satisfecho al ver pro— varo lanzó un suspiro, y levantando los
nunciada su sentencia. La avaricia de ojos al cielo, únicamente dijo:
Juan II contempló ya en su poder con —«Bendito tú seas, Dios y señor, que
la muerte de su antiguo favorito los riges y gobiernas el mundo;» é inme
tesoros que aquel en tantos años de diatamente rogó con mucho afecto al
valimiento habia allegado, y las villas religioso que no se separase de él, ni
y castillos que él mismo le habia do le abandonase hasta el penoso paso de
nado. -

la muerte, lo cual le ofreció el religio


El mandamiento de la ejecucion de so, y con esto quedó mas contento el
la sentencia se fió á don Diego Lopez ánimo de don Alvaro.
Zúñiga, primo del conde de Plasen Durante el camino, y separado siem
cia, el cual saliendo desde el mismo pre aunque á la vista de su comitiva,
campamento del rey en Fuensalida, continuó el maestre examinando su
donde se habia dictado atropellada conciencia y hablando con el maestro
mente la sentencia del maestre, par— fray Alfonso Espina en secreto, y con
fesando sus pecados por todo el tiem
tió primero á Valladolid; tomó consigo
número considerable de gente, y se po que duró la marcha.
presentó con mandamiento real al al Asi llegaron hasta Valladolid, lle
caide de la fortaleza de Portillo pa vándole á parar a la calle de Francos,
ra que le entregase la persona del en donde el maestre solia hacerlo en
Imaestre. tiempos mas afortunados para él, y que
Antes se concertó en el convento era la casa misma de Alfonso Lopez de
de San Francisco de Valladolid, donde Vivero. Rogó Diego Lopez á los religio
habia un famoso letrado y maestro en sos que no se separasen de él, sino
teología llamado fray Alfonso Espina, que se quedasen aquella noche en su
autor de una obra de moral muy cele— compañía, lo cual hicieron desde luego.
brada entonces, para que al dia si Todos tres durmieron muy poco
guiente partiese con un compañero ca aquella noche. Pasóse esta en arreglar
mino de Portillo, y que al pasar el rio sus disposiciones y en orar al Señor.
Duero se hiciese con disimulo el encon A la mañana siguiente muy tem
y.
36 CAUSAS CELEBRES.

prano oyó misa en su posada, y comul cia la plaza don Alvaro de Luna, acom
gó muy devotamente. Despues pidió pañado todavía del venerable religioso
unas guindas, de las que le trajeron franciscano fray Alfonso de Espina.
un plato, y comió muy pocas, bebién Llegado al cadalso situado en la plaza
dose un vaso de vino. mayor, se apeó de la mula y subió con
Preparado todo para la sangrienta la mayor entereza por los escalones
ejecucion, y levantado en la plaza un del cadalso; y cuando subió en él,
cadalso enlutado cubierto con una rica se vió donde estaba tendida la alfom
alfombra, Diego Lopez Zúñiga, acom bra, cogió un sombrero que traia en
pañado de la gente armada fué á bus la cabeza, y el anillo de sellar, y se lo
car á don Alvaro á la casa donde se dió á uno de los dos pages, únicos que
hallaba hablando con su confesor, y le le habian conservado de su tan nume
anunció que era el momento de que rosa servidumbre, el cual era el mis
bajase. Montado en una mula enluta mo que le habia descubierto en la pri
da, cubierto con una larga capa negra, sion de Burgos cuando intentaba es—
salió cabalgando con aire sereno, aun caparse, diciéndole:
que contrito. —Esto es lo postrero que te pue
Sonó el clarin repetidas veces, y do dar.
se comenzó á anunciar el pregon que El doncel se deshizo en llanto, y
habia acordado el consejo que lo habia sus lágrimas fueron acompañadas de
sentenciado á muerte, y que habia si las de la muchedumbre.
do redactado por el relator Fernando El mismo maestre se arregló los
Diaz de Toledo. Este pregon se halla pliegues de la ropa que llevaba vesti
ba concebido en estos términos: da, y porque el verdugo le dijo que
«Esta es la justicia que manda ha le convenia atarle las manos, ó al me
» cer nuestro señor el rey á este cruel nos los pulgares para que no hicie
»tirano, por cuanto él con grande or se algunos movimientos ó bascas, y
»gullo é soberbia, é loca osadía, é in apartase de sí el cuchillo con el espan
»juria de la real magestad, la cual tie to de la muerte, quitándose don Alva
»ne lugar de Dios en la tierra, se apo ro una cinta:
» deró de la casa, é córte, é palacio del —Atame con ella, le dijo, y yo te
»rey nuestro señor, usurpando el lugar ruego que mires si traes tu puñal bien
» que no era suyo ni le pertenecia; é afilado, porque pronto me despaches.
»hizo, é cometió en deservicio de nues Y le ató los pulgares.
»tro Señor Dios, en el dicho señor rey, Viendo alli cerca de sí á un caballe
»é menguamiento, é abajamiento de su rizo del príncipe, lo llamó y le dijo:
»persona y dignidad, y del estado real, —Ven acá, Barrasa, tú aqui estás
»y en grande daño y deservicio de su mirando la muerte que me dan: yo te
»corona y patrimonio, y perturbacion ruego que digas al príncipe, mi señor,
» y mengua de la justicia, muchos y di que dé mejor galardon á sus criados
»versos crímenes y escesos, delitos, que el rey mi señor á mí me man
» maleficios, tiranías y cohechos. En da dar.
»pena de lo cual le manda degollar, Llamóle la atencion un garfio colo
»porque la Justicia de Dios y del rey cado en un palo que habia sobre el ta
»sea ejecutada, y á todos sea ejem blado, y preguntó al verdugo:
»plo, que no se atrevan á hacer ni co— —Dime, aquel garabato que está en
» meter tales, ni semejantes cosas. aquel madero, ¿para qué está alli
» Quien tal hace, que asi lo pague.» puesto?
Llevaban este pregon colocado en —Para colocar vuestra cabeza, le
lo alto de una caña rajada. Una vez uno respondió.
de los pregoneros, en lugar de decir, —Despues que yo fuese degollado,
por los deservicios, dijo por los servi contestó don Alvaro, hagan del cuer
cios, y entonces esclamó don Alvaro po y de la cabeza lo que quieran.
con mucha serenidad: Demandó perdon al verdugo. Le
—Bien dices, hijo, por los servi cortó éste la cabeza y la mostró al pue
cios me pagan asi. blo, clavándola en el garfio, donde es
Caminaba, pues, en su mula há tuvo espuesta durante seis dias.
D0N ALVARO DE LUNA. 37.

Para mayor ignominia se habia co alli tambien los de su muger, doña


locado al pie una bandeja de plata don Juana Pimentel, hija del conde de Be
de recoger las limosnas para enterrarle navente, de la que tuvo un hijo de
de caridad, como se acostumbra con los quien hemos hablado, don Juan, y una
reos comunes, haciendo este último hija, doña María de Luna, en , quien
ultrage al hombre mas poderoso y opu vino á parar toda la sucesion de don
lento de la monarquía española, al hom Alvaro, y que fué casada con don Iñi
bre cuyos castillos andaba recorriendo go Lopez de Mendoza, segundo duque
en aquellos instantes el rey de Castilla del Infantado. Dejó ademas un hijo na
para , recoger sus riquezas, pactando tural, don Pedro de Luna, el que man
con los caudillos de las fortalezas la daba sus lanzas y que fué señor de
parte que á ellos habia de dejar, y la Fuentidueña.
¿ él se habia de tomar de los restos Asi pereció don Alvaro de Luna,
e la inmensa fortuna de don Alvaro. condestable, gran maestre de Santia
Tres dias permaneció espuesto el go, despues de haber vencido á los
tronco del condestable sobre el tabla
mas grandes señores y llenado de glo
do. La bandeja de plata se llenó de li ria su nombre, y hecho grandes males
mosnas, que acudian todos á echar con y tambien grandes servicios á su pa
abundancia para proporcionar una se tria. Don Alvaro de Luna en el apogeo
pultura al hombre cuyo poder y rique de su poder soltó el dique á su arro
zas habian asombrado, no solo á Cas— gancia, siendo implacable con sus ene
tilla sino á la Europa. migos, y que, segun la elegante es
Los que recogieron aquellas limos presion del historiador Mariana, era
nas, bien pudieron decir lo que el va— una fiera que agarrochean y que des
liente Belisario, á quien arrancó los pues sueltan. No podia menos de ha
ojos la ingratitud del emperador Justi cerse grandes enemigos y verificarse
niano, que le debia su trono y la con— en él la sentencia de Tácito: Imposi
servacion de su vasto imperio: Da obo— bile est, quin cadat, ille quem recentia
lum Belisurio, viator, quem eaccecavil et vetera odia premunt. No es posible
malitia non culpa. Dad limosna para que deje de caer, al que odios nuevos
enterrar á don Alvaro de Luna, á quien y antiguos persiguenl
mató la envidia de sus enemigos, no En los dias de su prosperidad, cuen
sus culpas!... tan que un astrólogo le habia pronos
Su muerte causó un terrible sen ticado que moriría en cadalso. Un pue
timiento de compasion. Recordaban to blo de este nombre en la provincia de
dos con lástima las buenas cualidades Toledo era de propiedad del maestre,
de don Alvaro: olvidaban sus defectos y aunque era despreocupado y de gran
y hasta sus crímenes, mas propios de talento, jamás quiso entrar en el pue
la época en que vivia que del hombre, blo de Cadalso para evitar el cumpli
y asi un numeroso acompañamiento miento del presagio. Alguna vez acam
siguió su cadáver á la ermita de San pó á la vista de este pueblo, pero siem
Andrés, donde se daba sepultura á los pre fuera de él. Sin embargo, el des
ajusticiados. Despues de seis dias fué tino se cumplió: don Alvaro murió en
tambien conducida alli su cabeza. Al cadalso.
cabo de dos meses fué trasladado con Dos veces, cuando ya se halla
¿ su cadáver á San Francisco, ba próximo á la muerte, cuentan que
onrado por los grandes, caballeros y estuvo á punto de perdonarle don
prelados alli existentes, y esto á pre Juan II. No era fácil que el monarca
sencia misma de don Juan II, que se hubiese olvidado al amigo de su niñez,
hallaba entonces en Valladolid. al hombre que le habia salvado de tan
Mas tarde por el celo del mismo tos peligros, que habia rehusado unir
Chacon, fué conducido á la rica y sun se á sus enemigos, y que jamás habia
tuosa capilla de Santiago, que habia hecho nada en deservicio suyo; pero
fundado en la catedral de Toledo don tambien cuentan que la reina fue la
Alvaro, donde yacen sus restos en un que impidió que se llevasen á efecto
precioso sepulcro con su busto de már las miras del rey y que escuchase el
mol sobre un lecho de alabastro. Yacen clamoreo que, ya en la desgracia y al
38 CAUSAS CELEBRES.

verle caido de su altura, comenzaba el Alvaro todas las consideraciones que


pueblo á levantar en favor del maes habia tenido su padre, y que despues
tre. Todo fué efecto de la reina Isabel, fueron revalidadas por su sucesor En
la que menos debiera haber persegui rique IV.
do á un hombre á quien era deudora Como el proceso formado á don Al
del trono, y que por haber hecho su varo de Luna fué un verdadero asesi
matrimonio hasta sin el consentimien nato jurídico, en que ni se oyó al reo,
to del rey, habia dado orígen al odio ni el rey tenia jurisdiccion para juz
que se engendró en el corazon del mo garle, tuvo que acudir al papa pidien
narca, y que tan funesto le fué. do, la absolucion para sí y cuantos in
A los quince dias del suplicio del tervinieron en el hecho, por ser don
condestable, el rey, que volvió á po— Alvaro persona eclesiástica como maes
ner sitio á Escalona, de donde antes tre de Santiago.
habia sido rechazado, logró apoderar— Cuenta fray José de Sigüenza en su
se de ella, pactando con la viuda de historia de San Gerónimo, que uno de
don Alvaro y con su hijo don Juan, los jueces, de los doce que intervinie
¿ los bienos y tesoros que alli habia ron en la sentencia de don Alvaro, fué
ejado don Alvaro, se partirian por el doctor Juan Velazquez, el cual se
mitad entre la viuda y él, dejando á retiró al monasterio de la Armedilla,
don Juan de Luna, su hijo, la villa de ue se hallaba entre Peñafiel y Cue
. Santisteban. llar. Mandóse enterrar en aquella casa,
Todas las villas que estaban por el y quiso que en la puerta de su enter
condestable se entregaron, menos la ramiento se colocase una cabeza de ce
de Montiel, que estaba señalada á su ra como en señal de la que habia qui
hija, y que defendia Chacon, aquel co tado á don Alvaro con su firma. Mos
mendador que hemos visto tan fiel al tróse asi el remordimiento y escrúpulo
maestre, y de quien si hubiese seguido de conciencia que tenia por haber fir
el consejo hubiera evitado su funesta mado la sentencia, tanto mas, cuanto
desgracia. que habiéndose llevado á firmar la sen
Desde Escalona despachó el rey una tencia de don Alvaro al arzobispo de
carta general (20 de junio), á todos los Toledo y al doctor Juan Rodriguez, lo
duques, prelados, maestres de las ór— rehusaron constantemente, y el rey no
denes, ricos-hombres, priores, conse quiso que se ejecutase hasta que la vió
jeros, alcaides, alguaciles mayores, ca firmada del doctor Juan Velazquez.
balleros, escuderos, hombres buenos Tan cierto es que no fué el consejo
de todas las ciudades, villas y lugares real el que impuso la pena á don Al
del reino, haciéndoles saber la causa varo de Luna, y que no tuvo funda
de la prision y del suplicio del con— mento legal alguno, que su primogé
destable. En este escrito los enemigos nita doña María, duquesa del Infanta
de don Alvaro vertieron todo su vene— do, demandó mas tarde al marqués de
mo, queriendo á fuerza de espresiones Villena el ducado de Santisteban, fun
denigrantes suplir la falta que se en dada en que no se confiscaron los bie
contraba en él de razon. Asi es que en nes á su padre porque no habia come
él el rey llama á su antiguo valido tido delito alguno, prometiendo probar
«hombre de serpentina osadía, de ma uno y otro, y el pleito se decidió á su
las, perversas y dañadas pláticas, de favor.
reprobados y malos actos, de palabras El mismo consejo de Castilla de
deshonestas y carecientes de toda ver claró despues, en juicio contradictorio
güenza y reverencia, lleno de fraudu con el fiscal de S. M., injusta la pena,
lencias, de recogitadas y vulpinas ma y nulo y de ningun valor ni efecto to
neras, de grandes, enormes y detesta do lo hecho y actuado contra el maes
bles crímenes, y perversa, soberbiosa tre por falta de jurisdiccion y por no
osadía.» haber sido oido.
Aunque la sentencia no comprendió Poco tiempo sobrevivió el rey don
la confiscacion, apoderóse el rey de las Juan á su infortunado favorito pues
tres cuartas partes de sus bienes, con murió el 21 de julio de 1354, sin haber
cediendo á poco al primogénito de don tenido un momento de tranquilidad ni
º
l)0N ALVARO DE LUNA. 39

de ventura en el año que sobrevivió á Nuestros lectores habrán visto fa


su antiguo amigo don Alvaro de Luna, tigados la serie de conspiraciones y de
siendo el juguete de dos sacerdotes guerras civiles que componen este rei
ambiciosos, el obispo de Cuenca don nado, guerras suscitadas por los pri
Lope Barrientos, y el prior de Guada mos del rey, don Juan y don Enrique,
lupe fray Gonzalo Illescas, por carecer infantes de Aragon, que poseian en
de los talentos, la firmeza y la decision Castilla bienes considerables en virtud
de don Alvaro, que tanto influyeron en del testamento de Fernando su padre.
aquel débil monarca, cuya salud em El rey de Aragon les prestó frecuente
pezó á quebrantar una fiebre lenta, mente el apoyo de sus armas. El mis
una obstinada cuartana. mo don Juan, el mayor de estos dos
Algunos autores se hallan inciertos príncipes, habiéndose casado con la
sobre el dia en que se verificó el suplicio heredera del reino de Navarra, se ha—
de don Alvaro. Ninguna crónica deter llaba en doble relacion con Castilla
mina el dia, ni aun la del bachiller Fer como soberano de un estado vecino y
man Gomez de Cibdad-Real, que fué tes como miembro de la oligarquía del pais.
tigo de vista, sabiéndose solo que el 30 Todas sus intrigas, todas sus maquina
de junio era viuda ya su muger, como ciones, eran ostensiblemente dirigidas
consta de una cédula espedida enton contra el favorito de don Juan II, don
ces y se deduce de otras pruebas di Alvaro de Luna, al que hemos visto
plomáticas. Nosotros creemos que la durante cuarenta y cinco años conser
ejecucion de don Alvaro de Luna se veri var sobre el alma de aquel débil mo
ficó, como dice el célebre historiador de narca un imperio absoluto.
España, don Modesto Lafuente, que tan En el órden estaba que la faccion
concienzudamente ha hecho sus estu enemiga, y casi siempre vencida, acu
dios históricos, el 2 de junio de 1453. sase á este ministro poderoso de todos
Acabamos de recorrer rápidamente los males públicos, y que le atribuye
cuanto las crónicas antiguas y manus se las mas siniestras y criminales in
critos de aquella época contienen de tenciones. Don Alvaro no era sin duda
mas importante sobre la terrible ca mas escrupuloso que la mayor parte de
tástrofe acaecida á don Alvaro de Lu los hombres de estado, y parecia ha
na. Ningun gobierno se hallaba peor ber recurrido á medios poco delicados
organizado que Castilla para sufrir las para satisfacer su avaricia y para lle
tormentas inseparables de una mino gar á la inmensa opulencia con que
ría, y en ninguna parte fueron mas eclipsaba el esplendor del trono de
frecuentes estas minorías. Verdad es Castilla; empero la energía y el valor
que cuando Juan II á la edad de cator le distinguian de esos cobardes sico
ce meses ciñe la corona de Castilla, su fantas que se elevan ordinariamente á
tio Fernando, infante de Aragon, y co la sombra del favor y la debilidad de
nocido por el de Antequera por sus los príncipes; y de seguro Castilla no
brillantes hechos ante esta ciudad, tie hubiera sido mas feliz ni hubiera pros
ne bastante virtud para rehusar un perado mas bajo el gobierno de sus
trono en que la nobleza queria colo enemigos.
carle para prevenir los males que te Su suerte ofrece una de esas lec
mia. Y en esta ocasion, sin embargo, ciones memorables de la historia.
Castilla tuvo menos que sufrir por las Despues de haber desafiado mil pe
facciones durante la infancia del so ligros, despues de haber tenido gran
berano, que despues de su mayoría. des pesares por conservar á este favo
Hemos visto á la reina madre, primero rito, tan pronto fugitivo, tan pronto
de concierto con el infante don Fer prisionero, perseguido por un hijo re
nando, y despues sola, cuando éste fué belde é ingrato, Juan II, en cuya alma
llamado al trono de Aragon, gobernar parecia eterno el afecto á don Alvaro,
la nacion con tal tino y sabiduría que cedió de repente á una intriga palacie
la hace honor. Esta época, que podria ga, y dejándose dominar de la esposa
llamarse en un sentido relativo la edad que el mismo favorito contra su volun
de oro de Castilla, cesó á la mayoría tad y casi sin obtener su consenti
de Juan II. miento, habia colocado en el tálamo
() CAUSAS CELEBRES.

real y en el trono de Castilla, conci-tigo singular, un page, Francisco Mal


bio un sentimiento de odio, y de odio donado, encargado por el maestre de
implacable, por el hombre á quien habia traerle á su casa la tarde misma en
amado por tanto tiempo. que fué precipitado de la torre. Los
Intentó varias veces asesinarle, ora demas cargos de la acusacion, como
en el monasterio de San Benito cuando" habrán visto nuestros lectores, eran
se le invitó á un régio festin, ora en fútiles y livianos; el único grave con
Cigales cuando fué convidado a una "tra don Alvaro de Luna, era el de la
cacería real, ora en otras varias oca- malversacion general, crímen que ya
siones; pero todas las asechanzas las no era tiempo de echarle en cara.
burla y desvanece la perspicaz pru- , La causa real de la mudanza repen
dencia y el arrojado valor de don Al-tina del rey, debe buscarse en la re
varo. La muerte de don Alfonso Perez pugnancia insoportable que un espíritu
de Vivero irrita á la reina, herida con débil esperimenta á la corta ó á la larga
la pérdida de su favorito, y hace tem- siempre á someterse á un genio supe
blar á los enemigos ocultos de don Al-rior, cuyo yugo no se atreve á sacudir;
varo que temen haber sido descubier-tormento que ha producido tantos
tos por Vivero tal vez en sus últimos ejemplos de inconstancia entre los so—
instantes. beranos. Debe tambien buscarse en los
Perjuro el rey, faltando al seguro contínuos y obstinados consejos de
que habia dado para que se le entre la reina para deshacerse de él, y en la
gase don Alvaro, no es menos escrupu halagüeña esperanza º habia pre
loso para arrancar su condenacion á un sentado al monarca de que aquellas
tribunal formado apresuradamente de inmensas riquezas que poseia el maes
sus mas conocidos enemigos. Ni es tre, y que eran debidas á su muni
menos escrupuloso en los cargos que ficencia, vendrian á recaer en él, y no
contra él se formulan V de los que no se se alzaria delante de su trono un va
le da audiencia ni admite defensa. La sallo mas poderoso, mas opulento y
muerte de Vivero es solo un hecho pre mas respetado en toda la Europa que
sumible y de la que solo existe un tes el mismo rey de Castilla.
--

DON ANTONIO DE ACUNA,


OBISPO DE ZAMORA,

(152G.)

Un dia del mes de mayo del año 1507 Don Antonio de Acuña era un ilus
se hallaba en movimiento toda la guar tre descendiente de una de las mas
nicion del castillo de Fermoselle, perte distinguidas casas del antiguo reino
neciente á la mesa episcopal del obis de Leon. Era hijo de don Luis Acu
pado de Zamora. ña y Osorio, y de doña Aldonza de
Hallábase alli preso con sus algua Guzman.
ciles el famoso alcalde de casa y córte La vida de don Luis de Acuña, su
don Rodrigo Ronquillo, hombre adus padre, presenta una serie de fases y vi
to, vehemente, inexorable, y severo cisitudes estraordinarias. Hombre des
juez á cuyo nombre temblaban los de tinado á brillar igualmente en la nobi
lincuentes, y que era tan terrible co lísima carrera de las armas que en la
mo magistrado, cuanto desgraciado en de las dignidades de la Iglesia, al fa
sus empresas de capitan á guerra, tí llecer su esposa abrazó el estado ecle
tulo que reunian por aquella época la siástico, y fué nombrado, en premio de
mayor parte de los magistrados. los anteriores servicios que prestara
on IRodrigo del Ronquillo acababa al estado y á la monarquía como se
de ser vencido, y hecho prisionero por ¿ primero arcediano de Valpuesta,
el obispo de Zamora, don Antonio de espues abad de Valladolid, y sucesi
Acuña, contra quien le habia manda vamente obispo de Segovia, y de la
do, con la "competente fuerza, el con santa metropolitana iglesia de Burgos,
sejo real con el objeto de evitar que en cuya altísima dignidad murió el año
tomase posesion de aquel obispado. de 1495.
El consejo real habia ordenado al Dos hijos le quedaron en su viudez:
Dean y cabildo de la santa iglesia dedon Diego de Osorio, que fué señor de
Zamora que continuase con la sede va Abarca, y don Antonio de Acuña. Con
cante, y se resistiese á reconocer por
sagrado éste, cediendo á las indicacio
obispo á don Antonio de Acuña, á pe nes de su padre, aunque violentando
sar de las bulas que de su prelacía su natural inquieto, ardiente y vale
presentaba de la Santa Sede, porque roso, y su robusta constitucion, á los
estudios eclesiásticos, fué destinado
en su obtencion y espedicion se habian
conculcado y violado todas las prero por su padre á las pacíficas funciones
gativas y regalías de la corona de Cas del templo, cuando todo , le llamaba á
tilla. vivir entre el estruendo de la guerra,
TOMO , 6
42 CAUSAS CELEBRES.

y á empuñar la espada en aquellos tiem dez Valdés, el papa Julio If, á instan
pos tan fecundos en guerras y re cia de Acuña, sin propuesta ni súpli
vueltas. ca de la corona de España, y sin que
Hijo del arzobispo de Burgos, fué interviniese para nada su gobierno,
rápida su carrera en las dignidades proveyó en él el obispado.
eclesiásticas. Todo le brindaba con un El marqués de Villena habia logra
venturoso porvenir. Fué nombrado muy do á fuerza de instancias el volverle á
jóven arcediano de Valpuesta, y ha la gracia del rey Católico don Fernan
iéndose conquistado por lo despejado do; pero nada ¿ á torcer la in
de su ingenio y por lo animoso de su fluencia del consejo real, celoso de
carácter el afecto de los reyes católi sostener las prerogativas y regalías de
cos Fernando é Isabel, desempeñó di la corona. Repetia órdenes sobre ór
versas é importantes comisiones di denes al Dean y cabildo de la iglesia
plomáticas, que llevó á feliz cima y de Zamora, para que se negasen á dar
término. Siempre activo, pero siem posesion á su nuevo prelado.
pre tambien de genio díscolo y audaz, Este, mas que un pastor apostólico
incurrió en la desgracia del prudente y piadoso, era un guerrero, y acostum
rey don Fernando y de la virtuosísima brado á batallar en Italia se propuso
reina Isabel. Lejos de abatirse, cual la apoderarse del obispado cual pudiera
mayor parte de los cortesanos, al mi hacerlo de una plaza que tuviese que
rarse en la desgracia de sus reyes, don conquistar. Reunió un cuerpo de tro
Antonio de Acuña marcha á Roma, y pas de la gente que pudo allegar, y con
alli al lado del papa encuentra una si ella se hizo fuerte en la iglesia de Fuen
tuacion enteramente adecuada á su ca te Sauco, perteneciente á su diócesis.
rácter impetuoso y guerrero. Desde alli tomó secretamente posesion
La Iglesia tenia entonces á su fren del obispado, y se fué apoderando con
te un pº batallador. Era este un ge cautela y seguridad de todas sus for
novés, el cardenal de La Robera, Ju talezas.
lio II. Mas capitan que prelado, al par A vista de tanto desacato, el con
que llevó al trono pontificio las cos sejo real mandó al alcalde de casa y
tumbres mas puras, los antecedentes córte, don Rodrigo Ronquillo, con su
mas honrosos, dejó las llaves de San ficiente número de gente y alguaciles
Pedro y empuñó la espada de San Pa para que hiciesen respetar la autori
blo. El arrojó de la Romania á César dad real. Llegó Ronquillo á la ciudad
Borgia, que la habia tiranizado desde de Zamora, reunió el cabildo, y obtu
el tiempo de su padre y tio Alejan vo de éste la promesa de que obede
dro VI; él combatió á los venecianos, ceria las órdenes reales.
que se habian apoderado de muchos El alcalde Ronquillo, cuya fama
pueblos del norte de la Italia corres como hemos dicho de hombre activo y
pondientes al patrimonio de la Iglesia; severo era tal que su nombre solo ins
él, despues de haber sido primero alia piraba terror á los pueblos, no conocia
do de la Francia, la combate fuerte seguramente el temple del hombre con
mente; lanza contra su rey Luis XII un quien iba á habérselas. Cuando se ha
terrible entredicho, y bate su ejército llaba Ronquillo mas tranquilo en su
en Bolonia y Ravena, formando la San alojamiento de Zamora, creyendo haber
ta Liga con la España y la Alemania, logrado el éxito de su comision, se vió
y hace que los franceses vencidos re sorprendido por el obispo Acuña, que
pasen los Alpes antes de su muerte. hizo armar con el mayor sigilo tres
Acuña se hallaba en su propio ele cientos hombres de su diócesis; y al
mento. Hacia en Roma la vida mas aná frente de ellos, y protegido por la os
loga á su carácter, y fué uno de los curidad de la noche se introdujo en la
que estuvieron siempre al lado de ciudad cercando la casa donde se ha
aquel pontífice batallador, habiendo llaba Ronquillo.
blandido su espada con honor en los Hombre éste" acostumbrado á las
campos de Ravena. Asi es que habien luchas y á los azares de guerra tan fre
do vacado la mitra de Zamora en Es— cuentes en aquella época, no perdió su
paña por muerte de don Diego Melen serenidad al verse atacado tan de im
DON ANTONIO DE AcUNA. *w.
43

proviso. Trató de oponer todos los me Personas de un temple como el


dios de resistencia; empero al consi del obispo Acuña no podian menos de
derar que se hallaba enteramente cer figurar en su época, Asi es que el rey
cado trató de romper por el medio ha don Fernando, olvidando la rebelion
ciendo una vigorosa salida. El obispodel obispo en el año de 1512 cuando
mandó entonces poner fuego á la casa;trataba de conquistar la Navarra y
agregarla definitivamente á la corona
al ver que todo iba á ser presa de las
lamas, y al oir el congojoso gemir yde España, arrojando de ella al rey Juan
las angustias de las gentes que consigo
Albret á quien ayudaban los franceses,
traia, don Rodrigo tuvo que entregarse
se vale del referido obispo Acuña pa
á prision, y entonces el obispo Acuñara una importante embajada cerca de
lo hizo conducir y encerrar en la foraquel soberano. Acuña desempeña esta
taleza de Fermoselle con todos los que
comision; arrostra los mayores peli
habian venido para privarle del obis gros y espone su vida en servicio del
pado que habia debido á la generosa rey Católico.
amistad del pontífice Julio II. Los navarros sin consideracion á su
Tanto escándalo hizo una gran sagrado carácter episcopal, sin respe—
sensacion en la córte del rey católico. tar el salvoconducto que del mismo
El consejo de Castilla veia altamente rey Juan Albret llevaba , le hicieron
ofendida y ultrajada la magestad de prisionero, lo maltrataron inhumana
este tribunal, tan respetado en la mo mente, y lo colocaron con su comitiva
narquía española, en la persona del en la fortaleza de Salvatierra.
delegado que enviara á cumplir sus Incomodado el rey de Navarra con
disposiciones. Asi es que se tomó el tra el obispo lo entregó al duque de
acuerdo de mandar á Zamora á otro al Longueville, general de las tropas fran
calde llamado Hernan Gomez de Her cesas, que habia venido desde el Bear
rera con cuatro compañías de caballe nes á auxiliarle; y al entregarle la per
ría, y una pieza de artillería, para que sona del obispo Acuña le hizo entender
castigase tamaño desafuero, é hicie º habia sido uno de los que al lado
se respetar las leyes y establecer el e Julio II en Italia habian publicado
órden. el entredicho que escomulgaba al rey
No era Acuña hombre que hubiese Luis XII, y uno de los que con mas de
emprendido una verdadera rebelion nuedo y decision habian combatido á
para dejarse vencer tan fácilmente. los franceses en el campo de Ravena; y
Asi es que allegando gentes de su dió sobre todo que todos los que formaban
cesis, y ayudado de sus clérigos, que su compañía, y que aparecian como
dentro de muy pocos años deberian cortesanos, eran otros tantos capitanes
hacerse famosos en las revueltas de esforzados y hombres amaestrados en
España, salió al encuentro de Hernan la artillería.
Gomez; batió completamente las tro Permaneció preso en poder del ge
pas º contra él venian; y con men neral francés el obispo Acuña, hasta
¿? e un gobierno tan fuerte como el que se verificó definitivamente la agre
el rey Católico tuvo éste que ceder gacion de Navarra á la corona de Cas
ante el valor rebelde del obispo de Za tilla, en cuya época recobró su li
mora, á quien se dejó en pacífica pose bertad.
sion del obispado adquirido por los Libre el obispo Acuña de su penoso
medios que hemos visto; y entonces cautiverio, regresó á Zamora; pero co
obtuvo su libertad el alcalde de casa mo su genio se avenia mal con la vida
à córte don Rodrigo Ronquillo, llevan humilde, apostólica y pacífica del pas
o en su corazon el despecho de su ven tor, en breve arrojando el cayado de
cimiento, y el deseo de vengarse de su éste, desenvainó la espada y fué uno
prision. . . de los mas poderosos elementos para
Hombres hay á quienes la fatalidad turbar la paz y sosiego de los reinos de
se complace en colocar unos enfrente Castilla.
de otros. El obispo Acuña y el alcalde A la muerte de Fernando el Cató
Ronquillo llevaban en sus frentes mar lico, hereda Cárlos, su nieto, las coro
cado este sello fatal. nas de España, de Nápoles, de Sicilia,
44 CAUSAS CELEBRES.

y de Cerdeña. Apenas tenia diez y seis poder militar, estableció el ejército


años; Guillermo de Croy, señor de Chie permanente y esa célebre institucion
vres, y Adriano de Utrech habian di de las milicias provinciales que ha lle
rigido su educacion. Adriano de Utrech gado hasta nuestros dias, y que en
es nombrado regente de España, y este nuestro prurito de alterar y reformar—
sabio teólogo, que no tenia la capacidad lo todo se ha desfigurado haciendo
necesaria para gobernar esta grande y desconocer las inmensas ventajas de
turbulenta nacion, haciendo justicia á aquella escelente milicia.
los talentos superiores del cardenal Ji A la llegada de Cárlos I á España,
menez de Cisneros, que tan importante lejos de conservar tan interesante mi
papel habia hecho durante el reinado nistro, que á la prudencia del hombre
de Isabel la Católica, y de don Fernan de Estado reunia la intrepidez magná
do, deja en sus manos toda la autori nima del héroe y la incorruptible inte
dad, y se contenta con el título de re gridad de un santo, da por pago á sus
gente. señalados servicios el desprecio y el
Cárlos, á la muerte de Fernando el desden, negándose á verle cuando sa
Católico, quiso tomar el título de rey lia el anciano ministro á recibirlo á
de Castilla y de Aragon; pero las leyes Burgos, y el pesar y el disgusto de tan
de España se oponian á esto, porque inmerecida afrenta hacen espirar en
ambas coronas pertenecian á doña Jua pocas horas en Roa al hombre que con
na su madre, y aunque la situacion de el hábito de San Francisco y el cordon
imbecilidad en que se hallaba la ponian de religioso habia sujetado á los nobles
fuera de estado de gobernarlas, su in y el pueblo y habia hecho mas por la
capacidad no habia sido reconocida por emancipacion del trono que todos los
las córtes, y era mirado como una vio reyes juntos.
lacion de sus privilegios. - Cárlos se entregó entonces á Adria
La energía de Jimenez de Cisneros no y á Chievres. Pronto conoció la pér
suplió á su consentimiento, y Cárlos dida de Cisneros.
fué reconocido en Castilla; mas la auto Reunidas las córtes de Castilla en
ridad de Cisneros menos poderosa en Valladolid consintieron en reconocerle
Aragon, no pudo hacer reconocer á ¿ soberano en union con su madre, y
Cárlos antes de su llegada. ajo la espresa condicion de que si la
El estado de la España era un esta reina doña Juana llegaba un dia á re
do crítico; necesitaba una administra cobrar la razon, volveria á tomar sola
cion vigorosa; las instituciones feuda las riendas de la gobernacion de la mo
les existian todavía á pesar de los co narquía. En Zaragoza fueron menos
losales esfuerzos que habian hecho Isa complacientes las córtes de Aragon, y
bel y Fernando para destruirlas. El tuvo gran dificultad en hacerse reco
oder residia casi en la nobleza turbu nocer en ellas en union con su madre.
enta, la importancia de las ciudades, Las córtes de Castilla habian votado un
sus privilegios y sus fueros les daba servicio gratuito de seiscientos mil du
una influencia estensiva á lo político. cados pagaderos en tres años, cantidad
Las facciones se mostraban con ardor enorme y desproporcionada que jamás
por todas partes y el descontento ge habian concedido á ninguno de sus re
neral amenazaba una próxima insur yes. Los aragoneses limitaron su do
reccion. nativo á doscientos mil ducados.
Por fortuna de la España el genio El descontento se dejaba ver por
del cardenal Jimenez de Cisneros se todas partes, Cárlos poseia apenas el
hallaba á la altura de aquellas grandes idioma español, se habia entregado en
dificultades. Ni la edad, ni las enfer teramente á la parcialidad flamenca, y
medades habian debilitado su vigoroso esto irritaba el carácter de los españo
y fecundo genio, ni le habian hecho les. Los puestos mas honrosos, los car
abandonar sus vastos proyectos. Su ob gos mas lucrativos se habian confiado
jeto principal era anonadar las exage á los flamencos, que cual aves de ra
radas pretensiones de la nobleza y piña se habian arrojado sobre este
asentar sobre sólidos y firmes cimien— pais dando pábulo á su sórdida avari
tos la autoridad real. Para esto creó el cia. Los tesoros de la España pasaban
DON ANTONIO DE ACUÑA. 45

todos á los Paises Bajos. Chievres hizo de y se negaba á conceder a l rey el


elevar al arzobispado de Toledo, pues diezmo de las rentas eclesiásticas que
to en aquella época importantísimo, á se le habia concedido á pretesto de ha
un jóven sobrino suyo, Guillermo de cer la guerra á los turcos. El papa
Croy, que no tenia todavía la edad re Leon X lanzó su entredicho, pero se
querida por los sagrados cánones. Esta hizo tan poco caso de él, que el mismo
elevacion fué mirada como un insulto Cárlos tuvo que solicitar su revoca
hecho á la nacion. cion.
Las principales ciudades se confe A pesar del descontento general,
deraron para la defensa de sus privile Cárlos, habiendo obtenido los medios
gios, é hicieron representaciones atre necesarios para presentarse con es
vidas al rey sobre el nombramiento de lendor en Alemania, nombró al car
los estrangeros para los empleos, sobre en al Adriano de Utrech regente du—
la venta de los cargos públicos, sobre rante su ausencia, nombramiento que
la esportacion del dinero, y sobre el hirió el orgulló de los castellanos que
aumento de las demas contribuciones.vieron con despique preferido un es
Con estas medidas animosas pusiéron trangero á la nobleza nacional; y sin
se los cimientos de la famosa union de tener en cuenta sus murmuraciones se
los comuneros, que estuvo á punto de embarcó en la Coruña el 22 de mayo
destruir el trono y variar la índole de 1520, y se dió á la vela para los
de la monarquía. Paises Bajos, para marchar en seguida
En este estado, la muerte del em á Alemania.
perador Maximiliano dejó vacante el Cárlos ciñó á su frente, adornada
trono imperial de Alemania. Mostrá ya con la corona de la península espa
ronse candidatos á él los reyes de Es— ñola, la corona de Carlo-Magno con toda
paña, de Francia y de Inglaterra. la pompa y el aparato de la dignidad
Leon X, ese gran pontífice que carac imperial.
teriza su siglo, ocupaba entonces la Cárlos era el príncipe mas podero
silla apostólica, y aunque se decidió so de la Europa. Era emperador de Ale
orque se diese á un príncipe aleman mania, rey de España y de Napoles,
a corona imperial, la dieta de Franc soberano de Austria y los Paises Bajos;
fort eligió á Cárlos I de España y V de los límites de la tierra conocidos pa
Alemania, despues de un debate de recian ensancharse á fin de que reina
cinco meses y diez dias, en 1519. se sobre un Nuevo Mundo, y el mismo
Recibió Cárlos la noticia de su elec año que se revistió la púrpura imperial,
cion en España, y los españoles vieron Hernan Cortés le conquistó el inmenso
con dolor aquel suceso que iba á pri imperio de Méjico. Sin embargo, la fuer
varles de un rey, que iba á hacerles za real de este monarca no correspon
prodigar su sangre y su fortuna por dia á sus vastos dominios. Su territorio
sostener agenas pretensiones de un tro no se hallaba contínuo, y sus vasallos
no estrangoro. se hallaban mal sometidos á su autori
Valencia rehusó los poderes del car dad. Las diversas naciones que com
denal Adriano, que en lugar del rey ponian su imperio, estrañas las unas á
Cárlos iba á presidir aquellas córtes, las otras, diferentes en costumbres,
declararon que su constitucion no en leyes y en idioma, guiadas por un
es permitia reconocer por rey á un odio mútuo, algunas veces por los ce
príncipe ausente, ni concederle un sub los, se prestaban con pesar á los pro
sidio. yectos de su soberano.
Castilla no se hallaba menos agita Una insurreccion violenta estalla en
da: las ciudades de primer órden re— España al tiempo que Cárlos se embar
presentaron contra la marcha de Cár— ca para los Paises Bajos. El pueblo
los, y por las intrigas y manejos de sus veia con indignacion que á pesar del
ministros pudieron á fuerza de seduc donativo que las córtes de la Coruña,
ciones hacer que las córtes le otorga con una debilidad sin ejemplo y ce
sen en la Coruña el subsidio que habia diendo á la coaccion y á los amaños,
pedido para marchar á Alemania. habian concedido al monarca, no es
El clero mismo se mostraba rebel cuchaba las representaciones que en
46 CAUSAS CELEBRES.

su memorial de agravios le habian pre cia de esta alarmante insurreccion.


sentado. Reunió su consejo; diversos fueron
Toledo se alza la primera, y Padi los pareceres: mientras insistian unos
lla es elegido gobernador y gefe de su sobre la necesidad de emplear la fuer
asamblea. Establécese una forma de za para reprimir la insurreccion, que
gobierno democrático compuesto de los rian otros que se tratase con mesura y
diputados de las diferentes parroquias moderacion , al pueblo, usando para
de la ciudad, levántanse tropas y se apaciguarle los medios de conciliacion.
declara gefe de la confederacion á don Prevaleció el primer dictámen soste
Juan de Padilla, hijo del comendador nido por el arzobispo de Granada, y
de Castilla, jóven ambicioso, empren Adriano dió entonces un paso impru
dedor y favorito del pueblo. Segovia, dente, que de seguro no hubiera toma
Burgos, Salamanca y otras ciudades do si hubiese escuchado su natural bon
siguen su ejemplo. dadoso, circunspecto, y propenso siem
Zamora no podia menos de levantar pre á los medios templados y de con
el estandarte de la rebelion. Hallábase ciliacion. -

en ella su obispo, don Antonio de Acuña. El alcalde don Rodrigo Ronquillo,


Grande era la ocasion que se le pre el mismo que anteriormente vimos pre
sentaba de dar rienda suelta á su fo so por el obispo Acuña en Fermoselle,
goso carácter. Repite en efecto el grito fué nombrado pesquisidor con mil hom
de la rebelion; acude inmediatamente bres de á caballo para someter á Sego
el conde de Alba con tropas numero via, donde antes habia sido juez, y don
sas, y le obliga á salir de la ciudad. No de habia dejado la fama que acompa
era Acuña hombre de darse por ven ñaba siempre á su nombre de cruel,
cido: reunió trescientos hombres, y sanguinario y severo.
aunque esta fuerza parecia al pronto Lejos de apaciguarse Segovia, re
cortísima é insuficiente para atacar una dóblase el ardor de su movimiento al
ciudad como Zamora, guarnecida de saber que es el feroz Ronquillo el en
almenas y murallas, se presenta de cargado de reprimirlo, cierra sus puer
lante de la plaza. La noticia del alza tas y se apresta á la defensa.
miento de diversas ciudades eran para Irritado con aquel insulto Ronquillo
el belicoso obispo un poderoso ejército declara rebeldes á todos, comienza el
auxiliar. La insurreccion se habia pro bloqueo de la ciudad, y ahorca inexo
pagado á Madrid, Guadalajara, Alcalá, rablemente á cuantos habitantes logra
Soria, Avila, Cuenca, y en todas par prender.
tes habia quedado vencedor el pueblo. Don Juan de Padilla acude desde
En algunas las mismas autoridades ha Toledo con un fuerte destacamento, y
bian tomado parte en el movimiento combinado con los de la ciudad sitia
insurreccional; en todas habian sido da, derrotó completamente á Ronqui
saqueadas las casas de los procurado llo; se apoderó de su bagaje, de su ca
res que habian asistido á las córtes de ja militar, y lo hizo retirar hasta Aré
la Coruña y votado los subsidios, valo.
asesinados los que de ellos habian cai Al saber Adriano la derrota del al
do en las manos del pueblo, y quema calde, mandó á don Alfonso de Fonse
dos otros en estátua, entre las maldi ca, comandante en gefe de las tropas
ciones y execracion del pueblo. de Castilla, que se dirigiese á sitiar
Zamora, al presentarse el obispo, en forma á Segovia. -

abre las puertas de la plaza, y dando Para ejecutar la órden que habia re
entrada á su animoso prelado, hace huir
cibido aquel general, quiso sacar un
al conde de Alba, agrupándose en tortren de artillería de Medina del Campo,
reuniéndose á las tropas derrotadas
no suyo toda la poblacion. En breve la
ciudad de Toro siguió el ejemplo de de Ronquillo. Medina del Campo era la
Zamora. ciudad donde el cardenal Jimenez de
Adriano, regente del reino, acaba Cisneros habia establecido su almacen
ba de vuelta de la Coruña de estable
cer en Valladolid la residencia de
¿ de municiones de guerra. Los
abitantes rehusaron dejar sacar las ar
su gobierno, cuando recibió la noti mas destinadas á combatir y destruir
l)ONANTONIO DE ACUÑA. 47

á sus compatriotas. Exasperados Fon tomó Padilla. Despues de haber liber


seca y Ronquillo por aquella resisten tado á Segovia aquel general, marchó
cia, ordenaron el asalto; y para forzar derecho á Tordesillas, donde residia la
los á abandonar las murallas hicieron reina doña Juana desde la muerte de su
poner fuego á algunas casas. Alzáronseesposo.
rápidas las llamas en todas las calles, Presentóse delante de aquella des—
reduciendo la ciudad en gran parte á graciada reina, y la pintó con tal vive
cenizas, y consumiendo los almacenes za los padecimientos de sus súbditos
llenos entonces de mercancías desti en el gobierno de su hijo, que aquella
nadas á la feria, que se hallaba próxi desgraciada princesa, que hacia mucho
ma, y que era en aquella época una de tiempo se hallaba privada de la razon,
las principales y mas concurridas de pareció despertar de repente de un lar
España. ¿ letargo; declaró que jamás habia oi
Segovia, al ver que Medina por ella do hablar de la muerte de su padre, y
se habia perdido, redobló sus esfuer añadió estas palabras: «Hasta que yo
zos, y los habitantes de Valladolid, á halle el remedio conveniente á vues
quienes la presencia del regente Adria tros males, deber es vuestro hacer
no habia contenido hasta entonces, al cuanto sea necesario para el bien pú
saber aquel desastre compartieron tam blico.»
bien el furor de sus compatriotas, des Creyó Padilla que habia vuelto á
pues de haber demostrado su indig lucir la razon en aquella débil cabeza,
nacion contra la conducta incendiaria y lo creyó tanto mas cuanto que esto
de Fonseca, quemando su casa hasta lisonjeaba sus deseos, é iba á traer un
los cimientos; ejemplo que siguieron poderoso auxilio á su causa. La Santa
otras ciudaties, eligiendo ademas nue Liga fijó su residencia en Tordesillas,
vos magistrados y alzando tropas. publicando que la reina habia recobra
Adriano trató de calmar al pueblo do la razon, y que ella misma habia to
reprobando las violencias cometidas mado las riendas del gobierno: empero
por Fonseca y por Ronquillo, y los des aquel habia sido un relámpago lúcido
tituyó de su mando; empero estos dos de inteligencia, y despues de aquel
caudillos se dirigieron á Flandes, vie corto intérvalo de lucidéz volvió á caer
ron al rey Cárlos, y éste los reintegró en su primer estado de sombría melan
. inmediatamente en sus mandos. colía, sin que jamás pudieran hacerla
Todo sonreia en un principio á la consentir ni lograr que firmase ningun
causa de las comunidades. Las ciudades documento ni que ejerciese el menor
de España eran numerosas; muchas acto del poder real.
de ellas, populosas y opulentas, poseian La Liga tuvo cuidado de ocultar es
fueros, franquicias é inmunidades con tas fatales circunstancias, y continuó
siderables, y el espíritu de su gobier— tratando los negocios del gobierno en
no interior era democrático. su nombre, y envio á Padilla á Valla
Ausente el monarca español, agota dolid para decidir á Adriano á que re
do el tesoro, habia apenas tropas en nunciase su cargo de regente, y á que
el reino. Todos estos motivos contri trajese los sellos del reino y los archi
buyeron á favorecer la causa de los ge— vos públicos.
fes populares, cuyo primer cuidado fué Recibia Cárlos entretanto en Ale
establecer entre los descontentos una mania noticias frecuentes de las tur
forma de union V de asociacion. Se baciones que agitaban la España. Como
acordó una asamblea general en Avila, el estado crítico de sus negocios en
y las ciudades enviaron á ella sus di Alemania no le permitia venir, resol
putados. Comprometiéronse por un ju vió atraerá los descontentos por las
ramento solemne á defender sus pri vias de la dulzura y de la conciliacion,
vilegios, y tomando el nombre de la reservándose emplear la fuerza si no
Santa Liga, comenzaron á deliberar vencia por aquellos médios. Ofreció á
sobre los negocios públicos de la na los insurrectos un perdon general, con
cion. -
la condicion de que rindiesen las ar
Recibió grande acrecentamiento su mas, prometiendo no exigir el subsidio
causa por las medidas ventajosas que concedido por las últimas córtes, y
48 CAUSAS CELEBRES.

comprometiéndose á no conferir en lo za; debiendo ademas sus propiedades º

sucesivo ningun empleo á los que no estar sometidas á los mismos impues
fuesen naturales de los reinos de Cas tos y gabelas que las del pueblo.
tilla; exhortaba al mismo tiempo á los fa era el estado crítico de la liber
nobles á defender los derechos de la tad de España. Hasta entonces la no
corona y de la aristocracia contra las bleza y las ciudades habian, marchado
exhorbitantes pretensiones de los co acordes entre sí. Los grandes de Es
muneros: nombró por último al almi paña, deseando limitar la autoridad
rante y al condestable de Castilla re real, habian favorido la causa del pue
gentes del reino en union con Adriano. blo, mientras este se habia limitado á
Habia llegado á tal grado la influen pedir la reforma de los abusos, pero
cia popular, que no se podia fácilmen viendo ahora que los privilegios de su
te destruir. Reposaba la Santa Liga so órden se hallaban invadidos, entonces
bre la unanimidad con que se había hubo ya una separacion entre nobles y
reconocido en todas partes su autori comuneros. Al ver los esfuerzos de una
dad, y fundándose tambien sobre el democracia que todo lo queria nivelar,
celo de las ciudades, resolvió obtener ue tendia á derribar su poder y su
satisfaccion de los agravios que estas influencia, los grandes se prepararon
últimas habian hecho presentes al rey á su defensa, y en la alternativa de
antes de su partida. Preparó un me obedecer al príncipe ó al pueblo, se
morial que contenia todas las quejas colocaron al lado del trono.
del pueblo, y todos los abusos cuyo Tres diputados fueron nombrados
remedio se deseaba. Se pedia que el por la Santa Liga para ir á Alemania á
rey volviese á España, que fijase en llevar al rey el memorial que se habia
ella su residencia, y que en el caso en redactado. El primero que llegó fué
que se viese obligado á ausentarse del preso. Habiendo recibido los demas el
reino, se comprometiese á no confiar la aviso de que no podian presentarse en
regencia sino á un español: que solos la córte imperial sin esposicion de su
los naturales de estos reinos pudiesen vida, volvieron sin haber ejecutado su
poseer los cargos y los beneficios del es comision.
tado y de la Iglesia, y que no se con Aumentó esta circunstancia el fu
cediesen cartas de naturaleza á los es
ror y la indignacion de los comuneros,
trangeros; que todas las contribucio al ver que un rey de Castilla se nega
-nes é impuestos se restableciesen al ba á admitir á sus súbditos en su pre
pie y estado en que se hallaban á la sencia; y esto que les pareció un acto
muerte de la reina Isabel; que se de de tiranía inaudita é intolerable hizo
volviesen á la corona las enagenacio. que la Liga tomase las medidas mas vi
nes que de ella se hubiesen hecho des gorosas para oponerse á los poderes
de aquella época; que á las córtes que reunidos de la nobleza y del trono.
se reuniesen en lo sucesivo enviase Veinte mil hombres se colocaron bajo
cada ciudad un representante del cle el estandarte popular: veinte mil hom
ro, uno de la nobleza y uno del pue bres que hubieran seguramente triun
blo, elegido cada uno en su clase; que fado bajo la direccion del intrépido don
ninguno de los miembros de los esta Juan de Padilla, que habia sido el ídolo
dos pudiese recibir pension ni empleo de los sublevados, y que poseia el
del rey, y que se reuniesen las córtes amor de los soldados y del pueblo.
cada tres años, ora las convocase el Se cometió una gran torpeza. Se dió
rey ó no, para deliberar sobre los asun el mando de los comuneros á don Pe
tos de la nacion. dro Giron, hijo mayor del , conde de
Estos eran los principales artículos Ureña, que por motivos de desconten
que los comuneros propusieron á Cár to personal contra el emperador habia
los. Determinados á humillar á la aris abrazado el partido de los comuneros.
tocracia, pidieron la revocacion de to Influyó grandemente para esto su no
dos los privilegios que habian obteni ble nacimiento: causa de preferencia
do los nobles con perjuicio de las ciu bastante singular en un tiempo y en
dades, y que no pudiesen ser ya nom una guerra en que el objeto que se pro
brados gobernadores de ninguna pla ponian era la elevacion del pueblo y
º
DON ANTONIO DE ACUÑA. 49

la humillacion de las demas clases. sorprendió y derrotó el regimiento de


Los resultados de este nombra los clérigos de Acuña, que se batieron
miento fueron fatales. Resentido Padi con el mayor denuedo: entró en la ciu
lla, no tuvo la abnegacion política de dad, se apoderó de la persona de la
disimularlo. Se marchó á Toledo, y con reina doña Juana, y volvió á recobrar
él llevó la gente que con él habia trai el sello real y los demas signos de la
do. Giron se puso al frente de los co autoridad monárquica.
muneros, dejando encargada la custo Fatal fué este golpe para los comu
dia de Tordesillas, donde se hallaba la neros. Giron, su general, era evidente
reina doña Juana, que servia de som mente incapaz para luchar contra los
bra y de simulacro á las disposiciones talentos superiores y la esperiencia del
de los comuneros, al obispo don Anto conde de Haro. El mal resultado de las
nio Acuña, que habia armado él solo maniobras de Giron habia hecho sospe
dos mil infantes, setenta lanzas, y muy chosa su fidelidad.
particularmente un escuadron de cua Giron y el obispo Acuña se reple
trocientos clérigos de su obispado, que gan á Valladolid con toda su gente. El
acaudillaba él mismo, y que al grito de obispo Acuña es recibido en triunfo:
jaqui de mis clérigos se les vió en di su presencia escita el entusiasmo por
ferentes ocasiones arrojarse intrépidos todas partes, mientras que la impopu
contra las tropas imperiales, y practi laridad y las señales de disgusto que
car actos de valor que hubieran hon se prodigan á Giron le obligan á dimi
rado á los soldados mas distinguidos. tir el mando del ejército.
Acuña, pues, era el encargado de La Santa Liga nombró entonces por
mantener á Tordesillas; pero viendo sucesor á Padilla. Este tardío nombra
aumentado su ejército hizo una escur miento reanimó el valor de los solda
sion á Palencia, que se mantenia fiel dos. Por ambas partes se hicieron
al emperador, y penetrando en ella grandes aprestos. El mayor embarazo
prendió al gobernador, quitó las jus era encontrar el dinero necesario para
ticias, y se hizo nombrar por aquel pagar las tropas; y esta dificultad des
cabildo obispo de aquella iglesia, re apareció casi enteramente por el atre
cibiendo de él mismo, como renta del vido paso de doña María Pacheco, mu
obispado la cantidad de diez y seis mil ger de Padilla. Superior á los escrú
ducados. pulos de la supersticion, y á los temo
Aunque don Pedro Giron estuviese res de los espíritus débiles propuso
enteramente decidido por el partido que apoderarse del rico tesoro y de los pre
servia, ni tenia la esperiencia ni los ta ciados ornamentos de la catedral de
lentos necesarios para puesto de tan Toledo; y la manera con que ejecuta
grande importancia. Fiándose en la este proyecto demuestra toda la pene
superioridad del número de sus tro tración de su espíritu.
pas, marchó derecho á Rioseco, donde Para quitar á, esta accion la apa
el ejército de los regentes mandado riencia de impiedad, doña María y to
por el condo de Haro se hallaba situa das las personas de su casa van á la
do: se apoderó de los pueblos de todos iglesia en procesion solemne, implo
los puntos alrededor, y trató de inter rando la proteccion de los santos, cu
ceptar los convoyes cogiendo por ham yos altares iban á violar, para defen
bre á los realistas. der la causa nacional. Este artificio
Hizo el conde de Haro entrar en la tranquilizó al pueblo, y evitó la impu
villa un considerable refuerzo, que pa tacion de sacrilegio. -

só por enmedio de las mismas tropas No menos embarazados los regen


de Giron. Viendo éste el mal éxito de tes para proporcionarse dinero, no se
sus medidas marchó sobre Villalpando, atrevian á recurrir á este medio. Su
donde los regentes habian establecido solo recurso fué la venta de las alha
su principal almacen. Este movimiento jas de la reina, la plata de la nobleza,
abrió el camino de Tordesillas á los y un ligero socorro que obtuvieron del
realistas, y el conde de Haro no dejó rey de Portugal.
de aprovecharse de aquella falta. Mar Despues de haber tratado en va
chó con rapidez sobre aquella ciudad; no de reconquistar al
T0M0 ,
pºlo
por algu
50 CAUSAS CELEBRES.

nas concesiones, los dos partidos se lientes compañeros en los campos de


amenazaron, y comenzaron las hostili Villalar, arrastraron la sumision de las
dades. El obispo Acuña habia caido en ciudades de Castilla. Toledo solo resis
fermo en Valladolid; empero la activi tió animado por la presencia de doña
dad de este hombre no le permitia per María de Pacheco, viuda de Padilla,
manecer pasivo en aquellos momentos, aquella muger singular en la que con
y se hizo llevar á Zaratan en una litera tinuaba el espíritu de su marido, no
para calmar algunas divergencias que obstante el gran daño que á la causa
se habian suscitado entre los capita popular hizo con su conducta el obis
nes y gefes de las comunidades. po Acuña. *

El ejército de los comuneros á las Mientras despues del asalto de Tor


órdenes de Padilla asaltó á Torreloba relobaton pierde Padilla un tiempo
ton. Mientras la Santa Liga se habia precioso entretenido en conferencias
detenido en falsas conferencias de paz con los imperiales para entablar ne
un gran número de tropas de Padilla, gociaciones, verdadero pretesto para
disgustadas de aquella inaccion, ó que concentrar sus fuerzas, y reponerse
riendo gozar del botin que habian he del terror que habia causado la pronta
cho en Torrelobaton, abandonaron el toma de aquella fortaleza, restableci
campo precisamente cuando el ejército do el obispo Acuña de la enfermedad
de los regentes se adelantó. Padilla de ¿ le tenia postrado en Zaratan, á
bilitado por la defeccion de sus solda onde habia ido á conciliar á los gefes
dos trató de verificar su retirada sobrecomuneros, marchó al frente de un
Toro. Alcanzado por el conde de Haro cuerpo de caballería hácia Madrid, Gua
á la cabeza de su caballería, antes que dalajara y Ocaña, puntos á que le ha
aquel pudiese llegar á las puertas de bia destinado la Santa Junta.
la ciudad, se vió obligado á aceptar el Su espedicion á estas provincias es
combate en un terreno cubierto de fan una continuada marcha triunfal. El mas
go y lodo, donde sus soldados se me ardiente entusiasmo le acoge por todas
tian hasta las rodillas, y permanecie partes. En todas se le reunen nuevos
ron asi espuestos al fuego de algunas defensores de la causa popular.
piezas de artillería que los realistas Evita el encuentro de las tropas del
llevaban consigo. El ejército de la Liga, conde de Benavente, que trata de im
agobiado, pues, de fatiga, quedó roto pedirle el paso del Ilenares; entra en
or el ataque impetuoso del de los rea Alcalá, aplaca las disidencias de los es
istas. Padilla, no queriendo sobrevi tudiantes, decididos unos por las co
vir á la ruina de su partido, se preci munidades y otros por la causa del rey;
pitó en medio de las filas enemigas con refuerza poderosamente su hueste, en
sus principales oficiales, esperando en tra en Madrid, donde es festejado con
contrar alli la muerte; empero solo fué el mayor entusiasmo; salva á Ocaña,
herido. Se le hizo prisionero, y fué con amenazada por las tropas de don Anto
denado sin forma alguna de proceso á nio Zúñiga, haciéndole retirar al Corral
ser degollado. Padilla vió acercarse la de Almaguer; lo persigue y lo alcanza
muerte con sangre fria, y con valor es en las llanuras del Romeral. Admite
cribió á su muger, algunas horas antes una tregua que le propone Zúñiga, em
de su ejecucion, una carta llena de pero faltando el caudillo imperial, ata
ternura y que revelaba ademas un es ca de improviso á la hueste de Acuña,
píritu superior digno de mejor suerte. que descansaba en la fé de la tregua,
En otra carta que dirigió á la ciudad de mas revuélvese Acuña cual sorprendi
Toledo, ciudad de su nacimiento, deja do é irritado leon, rehace sus gentes y
ver la alegría del hombre que muere bate completamente á los imperiales,
por una causa sagrada: Estas dos car y lo que al principio fué una disper
tas fueron muy célebres, y las ha con sion de sus tropas lo convierte en una
servado con cuidado la posteridad. So señalada victoria. Vuelve Zúñiga á pro
metióse despues á la mano del verdu poner una tregua, olvida generoso Acu
go con la firmeza del héroe y la resig ña la anterior perfidia, y aprovechan
nacion del cristiano. do la ocasion de ser los dias consagra
La caida de Padilla y la de sus va dos por la Iglesia á la memoria de los
-

A

l,0N ANTONIO DE ACUÑA. D

grandes misterios de la redencion del creyéndose seguro en España, trató de


género humano, licencia su hueste has salvarse emprendiendo un viage á Fran
ta pasados estos dias de festividades cia. Salió, pues, una noche de Toledo
religiosas, y solo y sin mas acompaña solo y disfrazado en trage de vizcaino.
miento que un guia entra en Toledo Era su intento al llegar á Francia di
para concertar con su Junta sus ope rigirse desde alli á Roma. Hombre ya
raciones ulteriores. de mas de sesenta años, sufrió, sin em
Grande fué el entusiasmo que es bargo, con valor los trabajos de esta
citó su llegada en la ciudad; frenética larga travesía. Iba ya á quedar en li
la alegría con que fué recibido por las bertad, cuando al tocar en la frontera
turbas populares. Arrebatado por es— de Navarra, en el pueblo de Villame
tas al apearse de su caballo, y llevado diana, fué reconocido por un alférez
en hombros de la muchedumbre, pene de las tropas del emperador. En vano
tró en la suntuosa y gran catedral el ofreció á éste si le queria soltar darle
Jueves Santo, en los momentos mis cincuenta mil ducados; el soldado fué
mos en que las santas bóvedas del gó fiel. Lo entregó al duque de Nájera,
tico templo resonaban con las proféti que le puso preso en el castillo de Na
cas lamentaciones de los profetas, Varrete.
anunciando la caida de la ingrata Je Antes de seguir al obispo Acuña en
rusalen. Interrumpiendo la sagrada su prision, diremos todavía dos pala
ceremonia, penetró el pueblo en el co bras para terminar el cuadro que rápi
ro, sentó al obispo belicoso en la silla damente hemos dibujado de la insur
arzobispal y le aclamó su prelado, aun reccion de las comunidades de Cas
que con aparente repugnancia de Acu tilla. -

ña, que sin duda recordaba la indig Despues de la fuga del obispo Acu
nacion que habia producido en la Igle ña de Toledo, doña María Pacheco, viu
sia su escandalosa conducta en Zamo da de Padilla, continuó todavía desa
ra y en Palencia. Al dia siguiente, 28 fiando la autoridad real, y haciendo
de abril de 1521, ya arrojó la máscara, que se estrellasen ante los muros de
cercando la catedral con doscientos aquella ciudad todos los esfuerzos de
ombres armados encerró á los canó las tropas del rey. La admiracion que
nigos en la sacristía , donde los incre inspiraba el valor y las grandes cuali
pó con palabras duras y amenazadoras dades de aquella muger infortunada,
para que confirmasen la eleccion que de la compasion que escitaba su desgra
cia haber hecho el pueblo en él para su cia, y la veneracion que se conservaba
prelado. No se dejaron intimidar los in por la memoria de Padilla, acumularon
dividuos del cabildo; treinta y seis ho sobre su cabeza todo el grande ascen
ras permanecieron sin comer ni be diente que su marido habia tenido so
ber, resueltos á perecer antes que pro bre el pueblo. Empleó para justificar la
fanar la silla de los Eugenios é Ilde confianza que en ella ponian todos los
fonsos, sentando en ella á un hombre recursos y todo el vigor de su genio.
tan poco apropósito para el ministerio No omitiendo ninguno de los medios
del altar, y que en su orgullo habia que pueden escitar al pueblo, recorría
tenido la arrogancia de vestirse los or— las calles de Toledo enseñando el hiio
namentos y atributos arzobispales. La de Padilla vestido de luto, precedido
noticia llegada á Toledo de la derrota de una bandera donde se veia el cua
de Padilla el dia 23 de abril, salvó á dro de la ejecucion de su padre, y ha
los canónigos de una indudable muer cia llevar crucifijos á las tropas en lu
te. Púsolos en libertad Acuña inme gar de banderas. Con estos medios sos
diatamente. - tuvo durante seis meses el entusiasmo
Viendo el obispo de Zamora perdi de los ciudadanos que defendian su
da su causa, y no queriendo tampoco ciudad; consiguiendo varias victorias
ser el segundo en una ciudad en don en muchas salidas que hicieron. Los
de mandaba con gran crédito una mu eclesiásticos que habian al principio
ger, ante cuyo prestigio se habia eclip abrazado su causa con ardor, aflojaron
sado el suyo, sostenido solo por el mo cuando vieron que se apoderaba de sus
vimiento fanático de las turbas, y no bienes. Llegaron por grados á hacer
º
CAUSAS C.ELEBRES.

disminuir la confianza que en ella se bir á 27 de setiembre sobre la guarda


tenia, y hubo un momento en que se del obispo de Zamora, rescebí, la cual
vió abandonada por el pueblo. Esta es me envió el cardenal de Tortosa. Por
la condicion de todos los gefes popu ella V. M. me manda que tengo de ha
lares, ser exaltados por el fanatismo cer pleito homenage por el dicho obis
popular d verse en las horas del peli po. Siendo cosa tan nueva para la ca
gro abandonados con ingratitud. lidad de mi persona, de creer es que
Reducida á este estremo, se retiró lo debió V. M. asi mandar, mas por re
al alcázar con algunos de sus mas de lacion de quien le pese porque yo lo
cididos partidarios. Alli todavía se de tengo, que no porque emanase de la
fendió cuatro meses enteros con admi real voluntad de V. M.; porque el plei
rable valor, y no pudiendo mantener to homenage que manda hacer, desde
el dia que nací lo tengo hecho para to
se por mas tiempo, salió disfrazada de das
labradora, y con no poco riesgo pudo las cosas de su servicio. Si V. M. se
llegar hasta Escalona, donde la dió un acuerda, esto paresció bien claro cuan
asilo su tio el marqués de Villena, y do fué jurado V. M. en Valladolid, que
desde alli se refugió en Portugal, á cu fuí el primero que lo juré, no querien
ya nacion llegó á los ocho dias de haber do otros juralle. Y pues estas pren
salido de Toledo, donde con el mayor das V. M. tiene de mí, y yo tengo en
afan la buscaban por todas partes, y no sus reinos las que V. M. sabe, dema
hallándola, se vengaron en derribar la siadas son las ¿ pleito homenage en
casa de Padilla demoliéndola hasta los este caso, ni hay otro ninguno, que
cimientos, sembrándola de sal para paresce mas desconfianza que poner
que no pudiese producir ni aun yerbas seguridad en lo que es á mi cargo, pues
silvestres, y levantando en el lugar ninguna obligacion puede ser tan gran
donde se alzaba un padron de igno de como la que tengo para esto y para
minia. -
lo demas que debo á su servicio. Supli
Refugiada en Portugal, murió en co á S. M. con esto se tenga por servi
Oporto, y hasta se llevó el rigor al cio, que si el pleito homenage dejo de
punto de negar que fuesen traslada hacer, es por no dar de sentir á nadie
dos sus restos al enterramiento de su que V. M. mande cosa tan nueva y no
familia en la ciudad de Toledo, ni que acostumbrada sino á los súbditos du
se sepultasen en Villalar, como ella ha dosos, y no á los que han tenido y han
bia dejado ordenado en su testamento. de tener la fé é firmeza que yo en lo
Preso el obispo de Zamora comen que á su servicio debo. Acresciente
zaron inmediatamente á entender en Nuestro Señor la vida y reales estados
su proceso los gobernadores del reino. de V. M. —Navarrete, á 16 de noviem
Acordaron su traslacion desde el casti bre de 1521 (1).»
llo de Navarrete al de Simancas inme Mientras los gobernadores conti
diato á Valladolid, y el único punto de nuaban la causa de Acuña, vino á sus
toda Castilla que habia permanecido penderla un suceso faustísimo para
siempre fiel á la causa del rey. uno de ellos que fué elevado á la Santa
El duque de Nájera, á quien se ha Sede.
bia dirigido la estraña peticion de que Vacante habia quedado el trono
prestase pleito homenage de tener en pontifical por la muerte del gran Leon X
guarda al obispo, y dispuesto siempre que habia pasado su vida entre las
á entregarle á las justicias del rey cuan magnificencias de un reinado de glo
do pidiesen su persona, vió en aque ria y las tribulaciones de un pontifi
cado lleno de dolores por el desgarra
lla traslacion una desconfianza inju—
riosa, tanto menos merecida cuanto miento de la Iglesia (1521). A su muer
que él era uno de los hombres que ha te la influencia de Cárlos elevó al tro
bian permanecido mas fieles, en tanto no pontifical á Adriano , Florencio, su
que otros muchos nobles y grandes se preceptor, bajo el nombre de Adria
ñores habian vacilado en las anteriores no IV; empero solo reinó un año. Hom
revueltas civiles. Asi es que escribió bre de conducta irreprensible, piado
esta sentida carta al emperador:
«Una carta que V. M. mandó escri (1) Manuscrito de la Academia de la llistoria.
DONANTONIO DE ACUÑA. 53
--

so, económico, activo, severo, habia no á habitar prisionero la torre de Lu


¿? siempre durante su go jan, en Madrid.
El condestable de Borbon sitió á
ierno de España á la clemencia; pero
los españoles no podian perdonarle ja Roma, y aunque pereciese al asaltar
más el gran delito de ser estrangero. sus murallas, su ejército penetra en
Al volver en julio de 1522 don Cár ella, la saquea horriblemente, y se re
los á España, anunció su venida con la nuevan todos los horrores de Alarico,
sentencia y ejecucion de varios de los de Totila, de Genserico y de los bárba
principales comuneros que habian es ros. Aquellos, sin embargo, habian
capado al rigor de las tropas imperia respetado las basílicas de San Pedro,
les en los primeros momentos; y des San Pablo, y San Juan de Letran; pero
pues de haber fatigado los verdugos nada fué sagrado para esta soldadesca.
con el suplicio de cuanta gente de Dos meses duró el saqueo. El pontífice
cuenta y valía habia tomado parte en uedó prisionero (1527) en el castillo
los movimientos y turbulencias de las ¿ San Angelo, mientras Cárlos V da
comunidades, publicó en Valladolid un ba al mundo el ejemplo hipócrita de
indulto, que mas podria llamarse una hacer orar en todas las iglesias por la
nueva lista de proscripcion; porque libertad del pontífice prisionero, liber
contenia mas de doscientas escepcio tad que podia conseguir con una sola
nes. Entonces le mandó formar la palabra: hipocresía que vemos imitar
causa del obispo de Zamora al de por los agentes de las venganzas impe
Oviedo. riales, y mas particularmente en la re
El papa Adriano no quiso asociarse lacion de la causa del obispo Acuña.
á los rencores del irritado César. Aun Fácil es conocer que propuesta en
que colocado por su influencia en el el ánimo del emperador la pérdida del
trono pontificio no quiso ser en él un obispo Acuña, se aprovecharia con ar
satélite de sus venganzas: halló en su dor de la muerte del pontífice Adria
carácter bondadoso bastante indepen no. Asi es que apenas murió Adriano,
dencia para oponerse á las miras de don el obispo de Burgos procedió á for
Cárlos: no quiso ser juez como pontí marle un nuevo proceso; pero de él sa
fice, cuando habia sido parte como an lió triunfante Acuña. -

tiguo regente de los castellanos, en el Cuando parecia que se habia apa


proceso contra el obispo de Zamora. gado y que dormia algun tanto su per
Miró á este estraviado prelado con pa secucion, el fiscal del consejo de Cas
ternal indulgencia, y le concedió un tilla don Pedro Ruiz, hombre que se
completo y absoluto perdon de todos habia distinguido en la persecucion de
los crímenes y escesos que habia co los comuneros, llevando sus procesos
metido en la época de las revueltas de con una ilegalidad comparable solo á.
Castilla, como uno de los principales la rapidez con que eran despachados,
gefes y parciales de las comunidades. pues que todo se reducia á que de
Gran desgracia fué para Acuña la nunciado por él el reo, y tomada con
temprana muerte de este pontífice, que fesion mas bien para identificar su
solo ocupó un año la cátedra de San persona que para la averiguacion del
Pedro, muriendo el 18 de setiembre crímen, sin defensa ni mas trámites
de 4523. pronunciaba el Consejo Real la senten
A Adriano sucede en el trono pon cia entre la acusacion del fiscal y la
tificio Clemente VII (1523). Era un Mé declaracion del reo: este hombre que
dicis, florentino; deseaba hacer el bien;
hacia gala de su severidad, hizo avo.
pero las circunstancias no favorecie— car á la decision del Consejo las causas
ron sus intenciones. Pesaba sobre él que debian ser sentenciadas por sus
cual una mano de hierro, la influencia
de Carlos V. Intentó librar á la Italia
¿ naturales. Este proceder escitó
as reconvenciones del mismo almiran
de la dominacion española, y se unio te de Castilla, y de los que habian ven
con Francisco I, con los príncipes de cido á los comuneros, que se dolian de
Italia, y con el rey de Inglaterra con ver que no se guardaban ni aun las
tra Cárlos V. Este venció: el rey Fran fórmulas esteriores para matarlos y
cisco I rindió su espada en Pavía, y vi concluir con ellos,
54 - CAUSAS CELEBRES.

El fiscal del consejo de Castilla, ha actuaciones que indudablemente con


biéndose entendido antes con la córte, tra él se hacian, afirmando que su de
y obtenido esta de Su Santidad el papa claracion no se tuviese por respuesta si
Clemente VIII un breve en 27 de marzo mo en cuanto á manifestar las causas de
de 1523, autorizando al emperador pa su impotencia. -

ra proceder contra el obispo Acuña, No bastó ni esta enérgica protesta,


entregó al presidente del Consejo, ar— que tuvo cuidado de repetir el obispo
zobispo de Granada, don Antonio Ro todas cuantas veces trató de exigírse
jas, á quien encomendaba el pontífice le una confesion, ni el no haber con
las actuaciones, una acusacion furi testado directamente á los cargos
bunda en que le acusaba como princi acusaciones que le hizo el fiscal don
pal causante y promovedor de las re— Pedro Ruiz. Fué acusado en rebeldía;
vueltas pasadas, como traidor á su pa y despues de haberle prorogado el
tria y á su rey, y como mal ministro término tuvo que nombrar el mismo
de la Iglesia; en que le acusaba de ha presidente cuatro procuradores de oti
ber cometido sacrilegios, de haber ro cio para que defendiesen á Acuña.
bado los templos, y de haber intentado El uno de ellos, Gonzalo del Monte,
pasarse á los franceses; y en su con aunque deseoso de servir al obispo,
secuencia pedia la imposicion de las mostró la escasez de medios en que se
penas señaladas por las leyes á tamahallaba por no habérsele pagado los
ños desafueros y delitos. gastos que en el año anterior le causó
. Hizose á Acuña firmar la notificael proceso que habia formado el obispo
cion de este auto del presidente delde Burgos á Acuña. Volvió, sin embar
Consejo, señalandole el término de go, á admitir los poderes que ahora se
quince dias para que acudiese á dar le daban de oficio, pero no pudo con
sus descargos por medio de procura seguir que se nombrase por letrado
dores. defensor al licenciado Buendia, hom
Alegó el obispo, lamentándose de bre muy versado en las materias ca
que sin cesar se le estuviesen movien nónicas, y que hubiera podido defen
o procesos, y mas siendo notorio todo der con vigor la causa del obispo de
lo contrario de lo que la acusacion fis Zamora. Nombráronse varios letrados;
cal, le atribuia, como pensaba probarlo, pero escusábanse unos, porque amaes
si de justicia habia copia y la libertad trados con la esperiencia, sabian el
que se requeria en tal caso. Atribuyó modo con que se juzgaba á los que ha
las contínuas molestias que con proce bian tomado parte en las parcialidades
sos le ocasionaba la envidia de sus de los comuneros, y el término que te
enemigos, deseosos de apoderarse de nian los procesos; y otros por temor
las rentas de su mitra, con muchos de que de consagrarse á la defensa de
bienes algo ocasionados á ser deseados. quien contra sí tenia todo el odio del
Opuso tambien á los procedimientos César, pudiese esto perjudicar á sus
que contra él nuevamente se intenta futuros adelantos en la carrera Asi es
ban el perdon que tan generosamente que fué menester que, bajo la pena de
le habia concedido el pontífice Adria escomunion, el arzobispo presidente
no, el que si hubiera vivido mas tiem del Consejo nombrase á los licenciados
po indudablemente le hubiera tambien Daza y Burgos.
Comenzaron estos su defensa con
dispensado todas las mercedes que es
taba en su mano hacerle. Hizo ver los buena fé y con celo. Entablaron una
achaques que sufria por la edad, las demanda de competencia al tribunal
enfermedades antiguas acrecentadas que entendia en la causa, é hicieron
¿ la larga y estrecha prision en que ver de una manera palpable el vicio
acia siete años estaba; y pidió que se que contenia el Breve del pontífice
le diese, como las leyes del reino pre Clemente VII, que servia de cabeza del
venian, copia de justa defension, y pro proceso, porque en él no se menciona
curador y letrado á quienes pudiese fiar ba ni hacia cargo alguno del perdon
la honra de su hábito eclesiástico por que habia dado su antecesor Adriano á
interés de su iglesia. Protestó ¿ las actuaciones promovidas por la mis
Illd CdUlS),
camente, por último, contra todas las
-

DON ANTONIO DE ACUÑA. 53


en -

A esta competencia se contestó por dades, fueron desleales y traidores á


el arzobispo de Granada admitiendo la su causa.
causa á prueba, con plazo y término Otras veces ponia por intercesor al
de quince dias, comun á ambas par duque de Nasau, al que escribia para
tes, y se nombró otro fiscal á los dos que se acordase de sus servicios he
nombrados anteriormente. -
chos á la corona real, y en especial los
La cuestion de competencia inter que habia prestado al rey don Felipe,
puesta contra el juez no podia resol de gloriosa memoria, teniendo en Roma
verse sino por la silla romana. Asi es el cargo de su embajadór. Alegaba que
que fué necesario acudir para su deci en las pasadas revueltas habia hecho
sion á Roma. Alli se paró este proceso, el bien que habia podido, sirviendo al
porque sin duda el emperador Cár rey; señaladamente que habia sido pre
los V y las gentes interesadas en la so contra toda ley, ofreciendo por su
perdicion de Acuña previeron que no libertad, y como fianza de pagar lo juz
era fácil salvar el obstáculo que los gado, cuarenta mil ducados segun qui
defensores de éste habian alegado, la siese el duque, y sin inconveniente
omision completa del perdon anterior para cumplir la paga suya en el obis
mente otorgado por la Sede apostólica. pado de parte de sus beneficios. Y que,
Interin seguia su curso lenta, pau aunque él desearia sobre todo un razo
sada y solemnemente en el tribunal nable retraimiento, siendo S. M. servi
del papa el proceso del obispo de Za do le serviria señalada y provechosa
mora, este prelado, abatido de verse mente en merced, porque suplica se le
tantos años encerrado en la estrecha de libertad, ó por sola clemencia y mer
fortaleza de Simancas, escribió cuatro ced justificada, ó por merced de man
cartas al emperador solicitando por di darle hacer justicia tan verdadera cuan
versos modos inclinar su ánimo á la to un principe debe hacer á sus súbdi
clemencia, ya recordándole los servi tos, y mas con los eclesiásticos hechura
cios prestados en otro tiempo en el rei de su real casa: certificando á su seño
nado de su padre y abuelo, ya alegan ria que son mas de doce las defensiones,
do el mérito de haber sido preso tres que cada una de ellas bastaria á no te
veces por causa del servicio público, mer daño por la justicia en ninguna
el habérsele debido á él el sosten del cosa, ya que no responda directamente;
sitio de Fuenterrabía y de San Sebas demas de haber ¿admitido ya á la
tian, y recordando que estaban sus clemencia del Santo Padre, solo escep
culpas perdonadas ya por el pontífice tuando los daños que paresciesen depar—
Adriano IV, hechura despues de Dios, ticulares, y ademas de estar ya dispen
del mismo emperador. sado por autoridad apostólica en lo
De órden especial del mismo em del juicio espiritual y temporal.
perador se pidió informe al obispo so Inútiles eran las cartas que el pri
bre todo cuanto sabia de los sucesos sionero obispo dirigia al César: inútiles
acaecidos durante la guerra de las co tambien los ruegos de algunas perso—
munidades, y en una larga comunica nas que intentaron, aprovechando oca
cion contestó á las tres preguntas de siones faustas de sus triunfos, hablar
importancia que de parte del mismo por Acuña y por los desgraciados co
emperador se le hacian sobre los di muneros. Siempre conservó Cárlos V
chos sucesos. Aunque en esta comuni en su corazon un odio profundo á los
cacion incurrió en la debilidad de in que habian movido aquellas revueltas
culpar á otros para hacer su propia en España. Asi es que nada pudo lo
defensa, no se presentó, sin embargo, grarse, ni aun en la solemne ocasion
como inocente; pero cargaba gran par en que derrotado el ejército francés
te de la culpa de aquellos sucesos so ante los muros de Pavía, y preso su
bre Laso de la Vega, el único de los rey Francisco I, parecia haber llegado
comuneros, rara y estraordinaria es á su apogeo el poder del emperador, y
cepcion, que habia vuelto á la gracia del ser la ocasion de derramar sobre los que
soberano. Tambien inculpó, por ven gemian en las cárceles ó estaban emi
ganza sin duda, á algunos de los que, grados en las naciones estrangeras una
habiendo tomado parte en las comuni mirada de compasion y de clemencia.
CAUSAS CELEBRES.
-

Varias voces se elevaron reclaman un dia cuando los parientes de aquel


do este acto insigne de clemencia del se preparaban sin duda á solicitar su
corazon del César. El célebre francis libertad, llegó al castillo de Simancas
cano, fray Antonio de Guevara, uno el licenciado Fernan Gomez de Herre
de los que mas habian contribuido á la ra con unos cuantos caballos y el ver
derrota de los comuneros, desde lo alto dugo. Sin mas forma de proceso hizo
del púlpito, cuando se hallaba cele salir atado de pies y manos del casti
brando el rey en la córte la victoria de llo sobre una mula á Maldonado Pimen
Pavía, pronunció un famoso sermon, tel, lo llevó por las calles de Simancas
que la historia ha conservado con el publicando á voces el pregonero los
nombre del Sermon de las alegrias. Alli delitos que se le atribuian; y se le de
de un modo patético, pero atrevido, golló el 16 de agosto á las nueve de la
reclamó el animoso franciscano el per IIld Ill Ild.
don de los que habian peleado á las Un año mas tarde, el 1523, el ma
órdenes de Juan de Padilla y del obis riscal de Navarra habiendo perdido la
po de Zamora. Inútiles fueron sus rue esperanza de recobrar su libertad, la
gos; Cárlos V oyó aquel cristiano ra buscó en el suicidio.
zonamiento con la misma indiferencia Cada dia se hacia mas insoportable
con que oia á cuantos se llegaban á él á Acuña su mansion en Simancas.
para suplicarle por los infelices pros Quedábale, sin embargo, una débil, una
criptos. lejana esperanza de poder conseguir
Pasaban los dias. Los grandes su su libertad, porque en los primeros
cesos prósperos de la monarquía apa meses de 1526 ¿ se preparaba para
recian, y no traian en pos de sí, cual celebrar magnificamente en Sevilla las
era de ordinaria costumbre, los bene bodas de Cárlos V con Isabel de Por
ficios de la clemencia. El obispo veíase tugal. El obispo Acuña tenia muchos
a solo encerrado en la estrecha forta poderosos parientes en la córte de Lis
eza de Simancas, donde en un prin boa, y á ellos habia acudido para que
cipio gemian cautivos con él otros dos se valiesen del favor de la emperatriz.
¿ políticos, don Pedro Maldonado Pero por si quedaba burlada en es
Pimentel y el mariscal de Navarra. ta ocasion, como en tantas otras, su
Ambos los habia visto sucesivamente esperanza, trató de entenderse con el
bajar por desgracia al sepulcro. alcaide del castillo, y aun de procurar
Pedro Maldonado Pimentel, que de á todo trance, por la fuerza, y del mo
bió haber sido degollado á la mañana si do que le fuese posible, su libertad.
iente de la derrota de Villalar, al la Al efecto procuró ganar con promesas
do de Juan de Padilla, debió su salvacion al alcaide, Mendo Noguerol, y estable
entonces á la intercesion del conde de cer inteligencias con algunas de las
Benavente, su deudo, que para decli personas que habitaban en la fortale
nar toda responsabilidad lo puso pre za. Mediaron varias cartas entre el
so en un lugar seguro. Maldonado Pi obispo Acuña y los que habia buscado
mentel pudo haberse fugado, y aun á por sus auxiliares, valiéndose de una
ello le invitaban los mismos que le lle esclava llamada Juana, muger liviana
vaban de escolta antes de entrar en la y de libre conducta, la cual tenia amo
fortaleza de Simancas; empero consi res y vivia casi en concubinato con un
derando que no todos los vencidos ha page de Noguerol llamado Armesto, un
bian de morir, salvado el primero y muchacho esclavo llamado Francisco,
mas rigoroso trance, y alentado con y por último con un tal Esteban, mozo
el íntimo parentesco que le unia á uno que cuidaba las caballerías del casti
de los hombres que debian ser mas po llo, y que fué el nucleo principal de
derosos con el César, entró en el cas las inteligencias del obispo.
tillo de Simancas. Habíale , hablado algunas veces el
Alli vió llegar mas tarde al obispo obispo desde la reja del cubo en que
Acuña. Diez y seis meses llevaba de estaba encerrado, y á poco tiempo la
prision Maldonado, cuando habiendo esclava Juana, que entraba con mas li
vuelto á España en el mes de julio el bertad en la habitacion del obispo para
emperador, al siguiente agosto de 1522 hacerle la cama y arreglarle los mue
DON ANTONIO DE ACUÑA. 57

bles del cuarto que constituia su pri decir con quien esta le dará, y asi se lo
sion, le entregó con el mayor disimulo pido y suplico, y escríbame la respues
una carta, que á la letra dice asi: la de la otra carta y sepa como Este
ban está á lo que W. S. le mandase, que
«Señor: en vos tengo mi Dios y Se bien sé que le escribió una carta y lo
ñor; el mayor deseo es de serviros en que le envió á decir; y no alargo mas
quanto yo pudiere y mis fuerzas alcan sino que si posible fuese lo que me en
zaren; pídoos por merced que me haga vió á mandar y pensase salir con ello,
esta merced, que me mande en que le que yo seria para mas de lo que pien
sirva, y la causa que me movió á es sa, y suplico á V. S. que me escriba
cribirle es que la portadora es perso todo lo que le pareciere, pues tenemos
na de quien muy bien nos podemos persona que nos encubrirá todo quanto
fiar, y hará todo lo que yo le mandare, quisiéramos, y no tenga temor ningu
y no tenga empacho en descubrirse no que el Alcayde lo sepa.—Plegue á
que es persona que no hará á la con— Nuestro Señor que le dé libertad co—
tra, y con eso me atreví á escribirle mo V. S. desea y yo tambien.—El ca
porque no sabe que placer me hace pellan servidor de W. S.»
que esto es lo de menos que por mí
hará y á esta causa me atreví. Y pí Establecida de este modo por me
dole por merced que me mande en que dio de la esclava una correspondencia
le sirva, que de cualquier modo que epistolar debió sin duda el obispo Acu
señor me mandeis estoy aprestado por ña franquearse mas por cartas con sus
la voluntad que me muestra en las auxiliares, porque en el miércoles de
ablas que me habla, y pídole por mer— ceniza al tiempo de ponerle en la mi
ced que por la ventana que no me ha sa el presbítero Ortega al obispo la
ble porque es cosa peligrosa á verlo el ceniza en la frente le entregó tambien
señor Alcayde, y pídole de merced que con el mayor disimulo esta carta:
me envie la respuesta con la que lleva
la presente, porque me hará gran «Muy Reverendísimo Señor.—Una
merced, que no haya miedo que lo des de vuestra Señoría reciví con la qual
cubra porque está á mi mandar y no save Dios el descanso que yo reciví en
alargo mas. ser yo tan dichoso que vuestra Seño
«El que queda con deseo de su li ría en cosas de tanta sustancia á mí las
bertad.—Esteban.» oviese manifestado, en la cual me en
via á mandar cosas de tanta calidad y
El obispo recibió, ya á los pocos sustancia, que no puedo pensar el me
dias por el conducto de la misma Jua dio ni manera que en ello poner se
ma una carta del presbítero Bartolomé pudiese, que no fuese con mucho pe
Ortega, que era el que celebraba la ligro y afrenta por la manera que
misa en el castillo, y aun hacia dos vuestra Señoría me ha manifestado,
meses que habia entrado á habitar en que si se oviese de negociar de ma
el mismo, porque el alcaide Mendo No nera que no oviese de ser afrentados,
guerol lo habia tomado por maestro de como W. S. ha escripto paréceme ya
sus dos hijos, Francisco y Leonardo, muy vien, mas como dice no se ¿e
para que les enseñase á leer. Decidido hacer sino con mucha afrenta y gran
el capellan con Esteban á favorecer la peligro y no salir con nuestra honra
evasion del obispo, se franquearon á por tener tan cerca el favor como tie
él, invitándole á que les mandase cuan nen, lo que á mí me parece es que si
to tuviese por conveniente, y dirigién se pudiese hacer por otro modo que
dole una carta que decia lo siguiente: nadie fuese afrentado, porque sin ello
nos ponemos avemos de determinar de
«Muy reverendo señor: suplico salir con la empresa y de la manera
á V. S. que por la reja que no me diga que V. S. dice no se puede hacer, por
nada, porque andan sobre mucho avi que si en ello nos ponemos y nos afren
so, que estotro dia azotaron á Francis— tan, avemos de determinar de librar
co porque hablaba con él; quando W. S. nos y no ser causantes de mas mal y
algo mandare puede bien enviarlo á. cautivacion, porque
TOMO le
piso que des
¿? - CAUSAS CELEBltES.

ta manera , que me pareciera mejor veis de hacer cosa sustancial á calum


que W. S. determinase padecer hasta nia, y para escusaros quando Dios
tanto que S. M. sus fiestas celebrase, quiera estoy en hacerlo de otra mane
porque pienso que W. S. alcanzará per ra y en hacer por tener primero se
don, y si en esta manera no huviése guridad del Alcayde, yo lo he de hacer
mos medio, no faltaria maña para que y no otro, y quando yo salga y o osto
oviésemos libertad, porque de la ma maré la fé como á otros, y de por casa
nera que dice, bien pienso que no sal hareis lo que os parecerá, n0 IrlaS
dremos con nuestra honra, porque nos de darme un cuchillo ó puñal ó espada
falta favor para poner nuestras perso— secretamente, y para mi defension en
mas en salvo, y si V. S. determina de las mudanzas de que por tanta razon
lo hacer, no lo ha de hacer de modo temo por la muerte del Comendador
que piensen ellos que yo soy en favor Mayor..... ni será menester, ni lo jus
y en consejo, y á mí parece que antes to puede ser injusto y tomada la se
se haga desta manera si posible es, que guridad dicha para..... obrar en la li
por la puerta que sale á la Capilla pue bertad, si me quisiéredes seguir po
de se salir, é despues que Noguerol dreis, y si os pareciere peligroso si os
dormido (que bien pienso que no lo hallasen conmigo, esta es razon rece
sentirá mas que piedra) yo dexaria larse esto, sin embargo, yo os daré ado
quitado el sorrojo y ternia puestas unas vais á, vuestro provecho y seguro que
sogas para que se colgase por la vela y por mí lo han de hacer, que no por
despues que subiese á la puerta y cor otros, si luego no le hallaren conmigo
tase las sogas de la puente y por ellas no le dirán palabra que en tiempo de
se bajase y quitase los clavos que tie mas rigor prendieron conmigo criados
me la puente, era bien ansi, mas de mios que luego soltaron, lo de aque
modo que V. S. dice no ha y medio nin lla arma os ruego mucho y que siem
guno y aun para esto que yo digo ha pre hagais por leer temprano con los
veis menester favor para poner vues muchachos y como se usa bayan á hol
tra persona en recaudo y de otra ma gar para que el de Portillo quando Dios
nera no os pongais en ello porque es diese mejor lugar, onrra y provecho y
el Diablo que le tienta, yo no se lo mejor, sin nada hacer y obligándome
aconsejo ni acepto en ello. Envíeme la á que tengais mas renta que entre vues
respuesta.»—No está firmada esta car— tros vecinos pocas veces acaece, si se
la ni tiene fecha. acertase vos acertareis, si se errase (lo
qual no soy tan vestia que no , tantee
En esta carta Ortega estaba toda muy bien), yo solo yerro, haced, her
vía por las dilaciones y por esperar al manos, lo que digo, y encomendadme
resultado de las bodas imperiales, y á á quien yo espero servir la merced
la amnistía que generalmente se creia que por su vondad me hará.»—No fir
debia darse con tan fausto suceso. ma la carta el obispo.
Esto se avenía mal con la natural
impaciencia del obispo, el que por me Cinco años hacia que Acuña se ha
dio de la esclava Juana, le remitió llaba en la prision; tenia perdidas to
aunque sin firmarla esta otra carta: das las esperanzas de perdon por las
bodas reales, y no fiaba su libertad
«Hermano: de cuerdos es recelar sino á su maña y á su fuerza. Se pro
por razon, mas lo que es contra razon veyó, pues, de tres armas: una espe
y en mi perjuicio tan grande y de la cie de maza y tres cuchillos, uno de
Iglesia, y en verdad para en perjuicio los cuales habia sujetado á la punta de
del mesmo Alcayde y sus hijos, gran un palo con clavos y cuerdas á mane
cargo teníades en me lo encaminar en ra de pica, y ademas un guijarro que
lo que buenamente pudiésedes, hacien guardaba en una bolsa de cuero como
do contra vuestra conciencia, y que yo si fuese breviario. Trató de seducir al
guial é lo que se ha de hacer Dios me alcaide Noguerol para obtener mas hol
diante, de manera que no se pueda gura en la prision, pidiendo que le
errar y con toda buena y templada ma concediese el que Ortega entrase á ayu
nera, y digo que vos, hermano, no ha darle á rezar las horas canónicas, pro
l, ON ANTONO DE ACUÑA. 50

porcionándole asi los medios de con flor de su juventud, y sus piernas en


certar su fuga. tumecidas por el largo tiempo que ha
Sus medios de seduccion se estre cia se hallaba en la prision, no le de
llaron contra la incorruptibilidad del jaron alcanzarle. Entonces el fugitivo
alcaide Noguerol, que sin faltar á las jóven cerró de golpe tras sí la puerta
consideraciones debidas á la alta dig del castillo, y echó á correr por el pue
nidad eclesiástica que representaba blo dando voces, dejando al obispo en
Acuña, no se olvidaba de su deber como cerrado; el cual en el acto se dirigió
responsable de la persona del obispo. á las almenas del castillo con intento
Una tarde, la del 25 de febrero del de arrojarse fuera de la fortaleza y em
año 1526, hubo larga conferencia entre prender su fuga. -

el obispo y el alcaide. Al parecer es Eran las cuatro de la tarde del se


forzó aquel sus razones, y puso en gundo domingo de cuaresma. Salia de
planta todo género de recursos para la parroquia de Simancas casi todo su
poder conseguir que le diese alguna vecindario, reunido alli para oir la pa
mas amplitud en su prision; y el al labra de Dios, cuando á las voces de
caide Mendo Noguerol parece que de susto y de alarma dadas por aquel jó
bió de resistirse y oponerse á las pro ven de que habia el obispo de Zamora
mesas que le hacia el obispo, las que asesinado al alcaide Mendo Noguerol,
consistian principalmente en unos be y de que aquel se huia de la fortaleza,
neficios eclesiásticos para sus dos hijos echaron todos á correr hácia el castillo,
Francisco y Leonardo; lo cierto es que que se halla casi pegado con las tapias
al parecer llegaron las cosas á tal pun ¿ pueblo. Los primeros que desem
to, que el obispo sin duda no pudo bocaron junto al castillo vieron enton
contener su irritabilidad; se dejó lle ces entre dos almenas y en ademan de
var de su genio, y con el guijarro que descolgarse del muro al prelado de
llevaba en la bolsa debió descargar un Zamora. Los alcaldes de Simancas,
terrible golpe sobre la cabeza del al Alonso Ruiz y Diego Breton, le roga
caide, el cual sin duda cayó aturdido ron con el mayor acatamiento que no
al suelo, y despues quedó muerto de se descolgase, porque lo matarian, y quo
varias puñaladas, echándole en segui se diese á prision. El obispo se entre
da encima el brasero que habia en el gó á ellos, despues de asegurarse que
cuarto, y atándole por último al pie los dos eran hijodalgos, y que no le ha
de la cama. rian mal alguno. -

Cometida ya la muerte, el obispo No le valió esto para que el hijo de


se preparó con los cuchillos que tenia Mendo Noguerol con la mayor irrita
llamó á una campanilla, haciendo su cion y atrevimiento le descargase un
ir á Leonardo, hijo del alcaide. Dijole fuerte puñetazo en las espaldas, pusie
á éste, saliendo á su encuentro, que se violentamente las manos en él, y
entrase, porque su padre estaba escri á no haberlo impedido las gentes que
biendo y lo necesitaba. cogieron al obispo se hubiera propasa
Debió ser tal la turbacion que se do á mayores desmanes.
notaba en el rostro del obispo Acuña, Juntos todos se encaminaron á la
y mas sobre todo las manchas de san prision, donde hallaron todavía calien
gre que llevaba en el zamarro que te te y casi respirando el cadáver del des
nia vestido, que el muchacho, impo graciado alcaide. Hallábase éste al pie
niéndose sin ¿ de que alguna des de la cama, atado, cubiertos de ceniza
gracia habia sucedido, retrocedió; echó los pechos, con dos ó tres contusiones
á correr; volvió con una espada á su en la cabeza, varias heridas en el ros
bir á la prision, y acometió al obispo. tro, y una mortal debajo de la barba:
Defendíase éste con la pica que habia todavía parecia que conservaba algun
improvisado con el palo y los cuchi resto de vida. -

llos; y despues de alguna lucha retro La inmediacion en que se halla Si


cedió el jóven, buscando las escaleras mancas de Valladolid, hizo que corrie
con grande alboroto. Siguióle el obispo; se inmediatamente la noticia á esta
pero tenia éste sesenta y cinco años, ciudad.
iba persiguiendo á un mancebo en la Inmediatamente que se supo este
r
60 CAUSAS (2. LEl 3RES.

suceso, i. el mismo dia 25 de febre-dáver, los alcaldes, despues de haber


ro, la chancillería de Valladolid, que recibido esta informacion de testigos,
reside tan inmediata á Simancas que dieron licencia para que enterrasen el
solo dista poco mas de una legua, envió cadáver en la iglesia.
para que procediesen á la formacion de llecho cargo los dos alcaldes del
la causa á los alcaldes de su córte don crímen, que habian venido de Valla
Juan Sanz de Menchaca y don Juan dolid, de la sustanciacion del proceso,
de Castro y Zárate, acompañados de comenzaron con gran tiento y pulso en
dos escribanos del crímen de dicha la averiguacion de aquel delito, que si
chancillería, que fueron Pedro Arias, bien indudablemente aparecia cometi
y Pedro de Garabey. do por el prelado de Zamora, preso en
Llegaron aquellos dos magistrados, la fortaleza de Simancas, podia haber
y mandaron á Alonso Calderon y á sido impulsado y arrastrado á él por
Alonso Ruiz, á quienes llamaron á su causas particulares que pudieran ate
¿º: que entregasen á los escri nuar ó debilitar en algo la naturaleza
nos la sumaria informacion que ha misma del delito gravísimo que venian
bian hecho sobre el desgraciado suceso a perseguir.
de la muerte del alcaide Mendo No Asi es que dictaron inmediatamen
guerol. te que se hicieron cargo de la causa un
Reducíase lo hasta entonces actua auto, por el cual, visto que el dicho
do á que los señores bachiller Alonso Mendo de Noguerol habia fallecido, y
Calderon y Alonso Ruiz, alcaldes ordi que el obispo de Zamora se hallaba
narios de Simancas, habian mandado preso y acusado de este crímen, que
al escribano Pedro de Garabey que les riendo proveer de justicia y de lo que
diese un testimonio del reconocimiento á SS. MM. debian y eran obligados, y
del cadáver del alcaide Mendo de No de la guarda y conservacion de la di
guerol, que se hallaba muerto dentro cha fortaleza, y de la persona del di
de un cubo de la fortaleza de Siman cho obispo, que en ella estaba, pidie
cas, detrás de una cama que estaba en ron al escribano público les diese por
el dicho cubo, y en el que se decia le testimonio signado de su signo como
mató don Antonio de Acuña, obispo de ellos en nombre de SS. M.M., y como
Zamora, preso por órden de S. M. en públicas justicias en dicha villa, to
la dicha fortaleza. Y que habiendo tra maban y aprendian la tenencia de la
tado de averiguar quién habia ocasio dicha fortaleza, y la guarda del dicho
nado realmente aquella muerte para obispo para tenerlo guardado en fiel
hacer en todo cumplida justicia, reci encomienda á nombre de SS. MM. has
bieron juramento en debida forma á ta tanto que por SS. M.M. les fuese
Juan Breton, Lope Gonzalez, Gome de mandado lo que en el caso debian ha
Leon, don Antonio Escudero, y don cer; y para ello hacian el pleito home
Antonio de San Pedro, vecinos de la nage en sus manos, como hombres hi
dicha villa, los que se hallaban pre jo-dalgos, que en este y cualquier ca
sentes, y á quienes daba fé conocer el so se requiere; y que asi lo hacian y
escribano: habiéndoles encargado los cumplirian, y que acudirian con todo
alcaldes que mirasen al dicho Mendo á SS. M.M., ó á quien por SS. MM. fue
de Noguerol, y dijesen y depusiesen de se nombrado, y cuando les fuese pedi
qué heridas estaba herido por donde do: y que como lo prometen pidieron
parecia , estar muerto, y habiéndole se les diese por testimonio en señal de
vuelto de un lado y otro los alcaldes, tenencia de la dicha fortaleza; tomaron
los testigos y el escribano, dijeron bajo las llaves de ella, y de su mano se las
juramento que Mendo tenia en la cara dieron al bachiller Alonso Carrasco, y
y en la cabeza nueve heridas como de áJuan Hernandez, hijo-dalgos, que con
cuchillo, y ademas dos ó tres golpes en el escribano de la causa estuvieron
la cabeza, y en un dedo de la mano dentro de dicha fortaleza. Y fueron
izquierda atado un cordel, y todo el ros testigos de este acto Pedro del Castri
tro y el pecho cubierto de ceniza, y que llo; Juan Breton, el mozo; Pedro Carn
al parecer se hallaba herido y muerto. po Seco, Lope Gonzalez y otros muchos
Hecho este reconocimiento del ca vecinos de la villa: autorizando este
DON ANTONIO DE ACUÑA. 6

documento Juan Jordan, escribano. cosa de dos horas: que hallándose


En el mismo dia los alcaldes de la él en una ventana de un cuarto de la
chancillería de Valladolid procedieron dicha fortaleza, vino el dicho obispo á
á tomar diversas declaraciones de tes— una ventana de una reja que se halla
tigos, para informarse de la verdad de ba enfrente de la en que él estaba, y
que se decia que era notorio cómo ha llamó á una campanillita que estaba
bia muerto á Mendo Noguerol el obis puesta á la reja, acudiendo una criada
po por escaparse de la fortaleza. de su padre para ver qué era lo que
Recibieron juramento en forma y queria el obispo. Este le dijo que se le
declaracion á Alonso Breton, escriba habia apagado una candela, que la fue
no, á Juan Lopez, á Alonso Nieto, á se á encender; y en esto acudió alli
Miguel Navarro, á Bartolomé Gutier otra criada del alcaide, porque el obis
rez, regidor, y á Miguel Gallego, veci po tornó á tocar la campanilla: y en
nos todos de la villa, los que juraron esto subió él á los corredores, llegó á
en forma. Y preguntados por los alcal la ventana donde se hallaba el obispo
des dijeron que sabian, ó habian oido llamando, y le preguntó lo que que
decir, que el dicho obispo habia llama ria: y el obispo le dijo que entrase den
do á Mendo Noguerol; y que con maña, tro, porque el alcaide, su padre, se
á pesar de ser un hombre robusto lo hallaba alli escribiendo, y que tenia
habia vencido; que lo habian visto necesidad de que firmase como testi
muerto y muy herido, y al obispo con go: vió que el obispo al decir esto, se
las manos ensangrentadas, habiendo hallaba azorado, y vió tambien man
cogido al obispo un cuchillo, y en una chas de sangre en un zamarro que
bolsa un guijarro grande; que el cu traia. Entonces llamó al alcaide su pa
chillo estaba todo cubierto de sangre; dre que saliese alli, y como no reci
que le vieron que se iba escapando de biese respuesta, y le chocase la sangre
la fortaleza, y que á las voces que da que cubria la vestidura del obispo, echó
ban los de adentro al ver la fuga del á correr á donde estaba su madre, y la
obispo acudieron los alcaldes de la vi dijo que creia que su padre quedaba
lla con otros muchos hidalgos, hallan muerto por las señales que habia visto.
do al obispo sobre la barbacana y que Tomó entonces una espada; subió á los
riéndose echar por las almenas, reu corredores; llegó á la puerta de la sala
niéndose mucha gente de la parte de donde estaba el obispo, la que él abrió;
afuera y de dentro de la fortaleza, y y al ver al obispo azorado, y ensan
prendiéndole los alcaldes y las gentes grentadas las manos, y demudado el
que acudieron: siendo todo cuanto sa semblante le dijo:—«¡Oh perro! ¡que
bian del caso porque eran pregun has muerto á mi padre!» Y al decir es
tados. to alzó la espada para darle; pero el
En vista de esta informacion los obispo le dijo que no hiciese ninguna
alcaldes de la chancillería mandaron cosa, porque su padre estaba vivo, y
poner al obispo unos grillos en los pies que le daria cien mil maravedises de
con una cadena y su candado, y unas renta. Y en esto el obispo se retiró á
esposas en las manos, asegurándole de una cuadra que estaba junto á la sa
este modo en la fortaleza: y consigna la, cogiendo un palo largo en el que
ron en la causa la diligencia de haberlo traia una varilla de hierro de la cama
asi mandado. de campo en que dormia, y en la pun
Al dia siguiente, 26 de febrero, hi ta de dicho palo un cuchillo como na
cieron comparecer los alcaldes y to vaja; al verlo asi se retiró amparán
maron juramento en forma á Leonardo dose de los golpes que el obispo le ti
Noguerol, hijo del alcaide, á quien le raba; y al tiempo de retirarse de la
preguntaron cómo habia hecho la muer puerta de la red, el obispo le tiró un
te de su padre el obispo. golpe muy recio que le pasó por enci
Contestó éste que en el dia 25, se ma del muslo y no le hirió. Entonces
gundo domingo de Cuaresma, sobre las él asió de la dicha puerta que estaba
dos y media de la tarde entró el alcai cerrada por la dicha red, y arrancó los
de, su padre, á donde estaba el obis anillos del candado, y se bajó abajo: se
po, llamado por él, y estuvo alli como fué á la villa, llamando en su ayuda á
6) (AUSAS CELEBRES.

los vecinos para que el obispo no se ro colorado á manera de breviario, y


marchase. Luego le dieron socorro: otro palo grande en que habia otro
acudieron las gentes de la villa, y to cuchillo y una varilla de hierro de ca
dos vieron que el obispo se echaba aba ma de campo, atado al palo para que
jo de la barbacana, y puesto en una al no se le pudiese cortar con espada, y
mena iba á saltar fuera, en cuyo esta que esto no era una cosa improvisada
do le prendieron y le pusieron en la sino amaestradamente hecha antes y
prision en que se hallaba hoy. Luego despacio. Dijo tambien que vió enci
subió este testigo á la cámara donde se ma de la frente del muerto una herida
hallaba el obispo, y halló á su padre que parecia ser hecha con el guijarro, y
Mendo Noguerol muerto, tendido en el que le pareció estaba degollado con el
suelo, atados los pulgares, y con cu dicho cuchillo, segun aparecia por lo
chilladas y pinchazos en la cara. ensangrentado que estaba. Asimismo
El ¿ Alonso Calderon, alcal vió que el obispo tenia las manos en
de de Simancas, fué llamado tambien sangrentadas, y que entonces se las
á prestar bajo juramento su declara lavó con vinó y le dijo al obispo:—
cion en el mismo dia, ante el alcalde «¿Por qué, señor, habeis hecho tan mal
Chinchilla, y dijo: cosa?» Que entonces el obispo le dijo:
Que hallándose en el dia anterior, —«Es verdad, pero el alcaide me ha
domingo por la tarde, en el concejo, tratado mal porque no le he traspasa
vió que habia gente movida en la que do un beneficio que me pedia para su
iba corriendo, y pensando que seria hijo;» que los dos habian andado force
algun ruido ó motin, él y Alonso Ruiz, jeando, y que como el alcaide no era
alcalde compañero suyo, fueron cor tan mañoso como él, lo habia derribado
riendo á ver lo que era, y les dijeron en el suelo y que lo que habia hecho
que el obispo de Zamora habia muerto era en su defensa.
al alcaide; que á esta voz acudió alli Los alcaldes de la chancillería hi
el pueblo en su mayor parte, y fue cieron tambien acto contínuo llamar
ron corriendo á la fortaleza , el di á Alonso Carrasco, vecino de Siman
cho Alonso Ruiz por la parte de fuera, cas, para que declarase bajo juramen
él entrando en la fortaleza porque le to lo que supiese de este lamentable
a abierto la puerta el hijo del al suceso, y manifestó que el domingo
caide, Leonardo Noguerol. Entonces despues de comer, como á cosa de las
vió, por la barrera de la fortaleza ade cuatro de la tarde, hallándose en la
lante, cómo traian al dicho obispo abra plaza de Simancas, habiendo salido del
zado, habiéndole cogido en el adarve sermon, oyó dar voces á una criada del
al irse á arrojar desde alli abajo, dos alcaide diciendo que el obispo mataba
hijo-dalgos y el hijo del alcaide. Este á su amo, y que andaba suelto el obis
queria matar al obispo, y entonces él po, y por esto se dirigió corriendo á la
le dió voces desde abajo diciéndole: no fortaleza, y llegando á las puertas de
lo hagais que os echais á perder, y ella, dieron voces que el obispo se des
guardaos que está aquí la justicia. Su colgaba del adarve. Entonces él corrió
bió entonces á donde se hallaba el di á ver el adarve fuera de la villa, y vió
cho obispo; lo cogió en su poder y le entre dos almenas sentado al obispo,
subió arriba, á la ¿ donde so con una pierna echada fuera, mas la
lia estar, mandándole echar unas ca una que la otra, y en actitud de que
denas y grillos y esposas; y que en el rerse arrojar de alli; que le dieron voces
aposento donde solia estar el obispo y para que no se echase. Que volvió en
donde dormia, halló á Mendo Noguerol, tonces á la fortaleza, entró en ella, y ya
alcaide de la fortaleza, muerto, tendi vió al bachiller Calderon, alcalde, que
do en el suelo, lleno de ceniza la cara, llevaba cogido del cuello al obispo y que
y con ocho ó nueve heridas desde el subió con él á un cuarto presenciando
pescuezo hasta la cabeza. Que alli ha como le pusieron los grillos y cadenas,
lló un cuchillo pequeño, cuyo mango viendo al alcaide muerto y degollado
estaba engruesado con muchos paños en el aposento donde dormia el dicho
para que hinchiese bien la mano, y un obispo, y á éste con la cara ensan
guijarro muy grande metido en un cue grentada, oyéndole decir que habia he
DON ANTONO DE ACUÑA. 0,3
l

cho aquello por el mal trato que le ha venas orgánicas, que estaba degollado
bia dado el alcaide, porque le habia es y tenia otras heridas en la cara, ha
citado á ello, y que no era hombre de biendo visto su cuchillo ensangrenta
sufrir tantas injurias, y no pudo aguan do con puño revuelto en unos paños,
tarlas; y contaba el dicho obispo el mo y que parecia el instrumento con que
do con que habia verificado la muerte debió haberse hecho la muerte, ha
habiendo batallado muy recio los dos, biendo visto tambien un guijarro en
y que el alcaide, si bien era robusto, vuelto en un cuero á manera de libro,
era poco mañoso, y por eso le venció, v tambien un baston con una vara de
habiendo corrido el peligro de ser hierro.
muerto por él si su destreza no le hu Llamado á declarar tambien Alon
biera servido para derribar al alcaíde; so Nieto, de edad de cuarenta años y
y que vió tambien un cuchillo con el vecino de Simancas, dijo que el do
mango lleno de lienzo atado por su ori mingo habia oido voces de que el obis
lla, y otro palo con una vara de hierro po habia muerto al alcaide; que al oir
que le cogia de arriba á bajo, y atado las se fué á la fortaleza y vió al obispo
á la punta un cuchillo, y un guijarro en el adarve, de medio cuerpo fuera
tambien muy grande con un cuero co que se queria tirar de alli; que enton
lorado que parecia un breviario, vien ces los de abajo le gritaron: Si os echais
do ademas que el alcaide tenia varios os mataremos; que entonces se detu
golpes en la cara porque le alzó la ca vo, y por la parte de adentro llegó el
beza y notó que estaba degollado y el alcalde de Simancas con otros, le cogie
cuchillo lleno de sangre. ron y le metieron en el aposento don
Habiéndole preguntado el juez si sa de estaba antes, y le echaron grillos,
bia si alguna persona habia dado favor y cadenas y esposas en las manos. Alli
ayuda al obispo para que pudiese ejecu vió al alcaide Noguerol muerto á los
tar aquella muerte, contestó que habia pies de la cama donde el obispo dor
oido decir que un criado del dicho al mia, y le vió atados los pulgares con
caide entraba en la traicion, y que lo oyó un cordel de bramante, y que tenia
á muchas personas, aunque no recuerda hasta ocho ó nueve heridas desde el
á quien, y que no sabe como se llama; pescuezo hasta los ojos, hechas sin du
pero que el criado servia de mozo de da con un cuchillo que alli vió, y que
espuela, y que lo habia visto dentro dicho cuchillo era uno pequeño que te
de la fortaleza cuando el alcalde cogió nia echado al mango unos paños, y que
al obispo, y habiéndose ausentado el tambien habia alli un palo grande, y en
dicho mozo, no habia vuelto á saber él una varilla de cama de campo, y ata
de él. do á la punta un cuchillo. Entonces
Habiéndose llamado tambien á de oyó decir al obispo que lo hecho fué
clarar sobre el mismo caso á Gonzalo porque le trataba mal y le daba malas
del Puerto, barbero de la villa de Si obras desde que murió el comendador
mancas, jóven de edad de veintiseis mayor, y que habian andado revueltos
años, dijo que el domingo por la noche un rato, y que se habia servido de su
habia sido llamado á curar un dedo al destreza y habia dado con él en el suelo.
obispo Acuña, que habia entrado en la Habiéndole preguntado los alcaldes
fortaleza y habia visto que tenia una de la chancillería si sabia ó habia oido
herida en un dedo de la mano dere decir quién diese favor y hubiese dado
cha, y habiéndole preguntado si aque ayuda á dicho º: para que hiciese
llo era una mordedura y cómo se ha lo que hizo, y si habia visto algunas
bia hecho, le habia contestado el obis gentes del campo en su socorro, dijo
po que habian andado él y el alcaide que no sabia de nadie, que lo único
revueltos de un lado á otro, y que si el que habia oido decir al obispo era: «es
alcaide era mas fuerte y jóven, él, como to no lo tengo en tres blancas, y otras
desde niño habia aprendide á luchar, cosas peores é fecho, é maldito el pen
tenia mas maña y le habia vencido, y samiento tenia que por ello habia de
despues vió alli al alcaide muerto, que quedar mal.»
averiguó las heridas y vió que tenia Llamado tambien á declarar Alonso
una puñalada en la garganta, en las Mesonero, de edad de treinta años,
64 CAUSAS CELEBRES.
--

dijo: que el domingo por la tarde, á las juraba por la consagracion que reci
voces que daban, se dirigió á la forta bió, y ¿ las órdenes de San Pedro y
leza y halló la puerta abierta, sin que San Pablo, que diria la manera con
hubiese nadie dentro, y despues vió que pasaron las cosas.
suelto al dicho obispo y no le conoció. Entonces declaró que pidiéndole el
Entonces subió arriba, al aposento don alcaide haria unos tres años, poco mas
de solia estar el dicho obispo, y alli ó menos, que le cediese algunas canti
vió muerto al alcaide Noguerol que es dades de los beneficios suyos, él se las
taba en la cámara donde dormia el di habia ofrecido en cierta manera; ade
cho obispo. Al ver esto y oir las voces mas, Noguerol habia dirigido igual sú
que daban de que el obispo se mar— plica á S. M. por conducto del conde
chaba, bajó con una lanza y se fué de Nasau y de don Juan Manuel y to
cerca de la barrera, y vió que el di dos sus buenos amigos, y que él le ha
cho obispo se queria arrojar abajo; que bia manifestado que habia andado er
entonces él le cogió y le quitó de alli rado al usar de diligencias y autos ju
y le metió dentro, y luego vino el al diciales en tratar este negocio, porque
calde de Simancas y le subió arriba, y teniendo él el oficio de guardarlo, po
le echaron prisiones, y que luego se dia dar márgen á que se le imputasen
fué de alli y no vió mas. ciertas acusaciones, y aun comprobar
Tambien dijo que habia visto al las de soborno contra él: que viendo
obispo al tiempo que se dirigia á la que se alargaba la negociacion por este
barrera, que llevaba un baston gran motivo, el alcaide procuró obtener es
de con un cuchillo de hierro á la pun tos beneficios de S. M. por medio del
ta de una vara de hierro de cama de secretario del rey don Francisco de
campo atado á ella; que le vió todas Cobos, y de otras personas; y que aun
las manos ensangrentadas, y refirió cuando le habian dado buenas espe
de qué iba vestido. Habiéndole pre ranzas de conseguirlo, las dificultades
guntado quién habia dado ayuda y fa se habian aumentado y no habia podi
vor para cometer este delito al obis do obtenerlas. Acusaba al obispo de
po, dijo que no lo sabia, pero que cuan ser causa de estas dilaciones, y asi es
do bajaba de la fortaleza de ver al que aquel dia entre otras cosas le dijo:
muerto, porque el obispo no se fuese, «Ello se hará, aunque V. S. no quiera...—
se halló con Esteban, criado de dicho Con la merced de Dios y de S. M. no
alcaide, y le dijo como no habia ar— haya miedo que yo me fuerce contra
mas en dicha fortaleza, y que dicho mi querer, repuso el obispo.
Esteban calló, y que presumia que es Entonces el alcaide, con su acos
taria en favor del dicho obispo, pero tumbrada melancolía y alteracion, se
que no lo sabia. dirigió contra él, y éste se levantó, se
Despues de haber tomado estas de agarró al alcaide, y juntos con ira y
claraciones, procedieron los alcaldes á enojo lucharon por un espacio de tiem
tomar la confesion del obispo, para lo po, diciéndole el alcaide «rendíos,» y
cual se trasladaron á la fortaleza, al él á su vez que se rindiese tambien;
aposento y cámara donde don Antonio pero que siendo mas mañoso, aun
Acuña estaba apresado, y le dijeron cuando el otro era mas fuerte, le ven
que querian tomarle y recibir su con ció en la lucha cayendo al suelo, y
fesion de lo que habia pasado, requi apagando al tiempo de caer una can
riéndole para que les dijese la verdad dela que estaba al través puesta en el
de lo que habia pasado en la muerte, t0'I) 0.
y por qué causa la habia verificado. Quiso asegurarse del dicho alcaide
El obispo, con grillos en los pies y de que no le dañaria el enojo de aque
sujetas las manos con esposas, pero al lla riña, para que el alcaide le cum
mismo tiempo con una entereza supe pliese lo que le habia ofrecido de dar
rior á su avanzada edad, les dijo que permiso al capellan que le decia la mi
él era obispo, y al seglar no le perte sa para que entrase á rezar con él, y
necia ni era justo que dijese su dicho servirle, y dejarle hablar con todos los
y confesion, pero que como á señores criados sobre la pretension de su jus
y superiores se les queria decir; y que ticia, y pasear libremente por los cor
lJONANTONIO DE ACUNA. 65

redores, y comunicar con ellos por es cerró de golpe, y dejándole encerrado


crito y de palabra. se fué á publicar por las calles su ten
El alcaide decia que seria contento
tativa de fuga, El, entonces, entrán
de que asi se hiciese de puertas aden dose por la ronda de la tela, se enca
tro, y no mas, como le tenia ofreci ramó sobre el adarve para arrojarse,
do; y para que diera estas seguridadesechando delante el baston que llevaba;
el obispo daba voces, porfiaba, y can y entonces vió á los alcaldes que en—
sándose ambos le amenazó con el cu traban en la fortaleza, siendo llevado
chillo, despues de haber dejado No con injurias y aun golpes que le dió
guerol el suyo, hasta qué mostró estar Leonardo al cubo donde se hallaba, y
muy cansado y muy ronco y se rindió, donde le habian puesto con grillos.
y se dejo atar con juramento muy so— Que él no sabe nada de la muerte del
lemne. -

alcaide, sino que era malquisto de sus


El obispo, despues de haberle car criados y esclavos. -

gado antes con alguna ropa que estaba - Habiéndole preguntado que pues se
alli cerca, y de arrimarle un poco un habia hallado muerto en la cámara
brasero para impedirle que no se le— donde él estaba, y con aquellas heri
vantase, le dejó tan cansado como él das, y degollado, quién se las habia
mismo lo estaba, reposó un buen es hecho, contestó que no lo sabia, sino
pacio; y aprestando los cuchillos con que desde las primeras revueltas el al
una manera de mango de lienzo, y po caide tenia un cuchillo, y que él le da
niendo una piedra en un pedazo de un ba unas punzadas en las manos, y no
fardel de cuero, y un cuchillo en un en ninguna otra parte.
hierro de la cama en forma de pica so Preguntado si le ató al pie de la ca
bre un palo que hasta el hombro poco ma, contestó que si, que era verdad.
mas ó menos le llegaba, y que habia Preguntado cuántos golpes le dió
tenido para pasear hasta entonces, sa con el guijarro que parecia breviario,
lió á ver si se habia sentido en la ca contestó que no le dió golpe ninguno
sa el ruido de la reyerta. con él: que despues que le tenia atado
Hallándolo todo en silencio tocó la anduvo haciendo lo que tiene dicho,
campanilla para que le encendiesen poniendo el cuchillo en el palo de la
una luz. Al llamar subió Leonardo No vara de hierro, y la piedra en el val—
guerol, hijo del alcaide, á informarse dres, y el mango en el otro cuchillo,
de lo que ocurria. Entra, le dijo éste, por el miedo que le causaba Leonardo y
porque tu padre está escribiendo, y los demas de la casa.
te necesita. Al ver Leonardo alterado Preguntado si cuando entró el al
al obispo, y algunas manchas de san— caide le echó ceniza en los ojos, con
gre en su zamarro, sospechó lo suce testó que no.
dido; bajóse inmediatamente, cogió Preguntado quién le habia dado los
una espada, y volvió á subir á los cor cuchillos, dijo que eran los del servi
redores donde estaba la prision del cio de la mesa.
prelado, gritándole con ira: «¡Ah, per Declaró tambien que no tenia con
ro, que has muerto á mi padre!» que cierto ninguno con persona alguna pa
riendo descargarle un golpe terrible. ra fugarse, y que habia puesto en el
Entonces el obispo echó mano del pa cabo del cuchillo los trapos para que
lo en que habia puesto el cuchillo; y á tuviese algun asidero, y le llenasen la
la vez que reprendia á éste, lo persi mano; habiéndolo hecho despues de
guió vigorosamente evitando las esto haber atado al alcaide, y porque el al
ca las que le tiraba; y en medio de la caide le habia pedido su cuchillo se lo
alteracion de la casa se dirigió hácia habia cogido, y puesto los trapos para
el muro por ver si hallaba algun lugar aprovecharse de él.
donde pudiese salvarse de Leonardo y Preguntado por qué tenia el guijar
de los de la casa, que ya se iban reu— ro metido en un cuero, dijo que para
niendo con algunos de los del pueblo, aprovecharse de él, y que lo tenia alli
porque no habiendo podido alcanzar para majar los colores.
por sus años á Leonardo, éste al llegar Declaró tambien que él solo habia
á la puerta del castillo, la traspuso, la puesto el hierro de lacº, y el cuchi
TQu0 lº
605 CAUSAS CELEBltES.

llo en el baston; que lo habia hecho Habiéndole preguntado el alcalde


para su defensa si era necesario: y fir por qué cuando escribió al obispo le
mó esta declaracion, confesando ade decia que la portadora era persona de
mas que en cuanto á salir de la forta confianza, y qué fundamento tenia pa
leza pudo haberse ido muchas veces, ra tener esta confianza, manifestó que
porque el alcaide en el tiempo en que la esclava Juana le habia dicho que ten
se casó el comendador mayor, dueño dria secreto cuanto entre él y el obis
de la fortaleza, don Juan de la Vega, po pasase, segun ya tenia manifestado
presidente que era del consejo de las anteriormente, pero no en la carta.
Ordenes, dejaba solo en el castillo un Habiéndole preguntado por qué el
mozo, y que ahora pudiera muy bien dia que acaeció la muerte del alcaide
haberse ido si no fuera por el caso que se éscondió, y en que lugar, manifestó:
habia ocurrido. ue hallándose en la iglesia del Salva
En el dia 27 de febrero, el alcalde or oyó voces que decian que el obis
Zárate fué á la cárcel pública de la vi po habia muerto al alcaide, y que al
lla para tomar declaracion al presbíte zándose el manteo se marchó corrien
ro Bartolomé Ortega, vecino de Bamba. do á la dicha fortaleza; entró en ella, y
Le preguntó que era lo que hacia en la cerró la puerta; y llegó en esto á ella
villa, y le contestó que habia venido Alonso Ruiz, alcalde, y se vino á casa
para decir misa en la fortaleza de ella. de la Compasquillo, que era su hués
A las diversas preguntas del alcal eda antes que él viviese en la forta
de, contestó que las misas las pagaba eza, y sentándose en un poyo de la
el alcaide, y que hacia ocho meses las cocina, se presentó Esteban con un
decia en la fortaleza, y solo unas tres lanzon, y le dijo que venian á matar
semanas que se habia trasladado á le. Encargó entonces á su ama que
ella para enseñar las primeras letras mirase lo que era, y él se marchó á ca
á los hijos del alcaide: que el obispo de sa de un tal Vicente, y se retiró á una
Zamora no decia misa, pero que él la alcoba, y se echó encima de la cama;
decia en la capilla de la fortaleza: no y al sentir que venia gente se metió
sabiendo si la oia el obispo: , que al entre los colchones, tapándose con la
acabar de , decir la misa y despues ropa de la misma.
que salia, bajaba la cabeza haciendo Preguntado por el alcalde, cómo si
reverencia al obispo; y que el miércoles no tenia culpa ninguna en la muerte
de Ceniza se la habia puesto en la cabe del alcaide se habia escondido, contes
za antes de la celebracion de la misa. tó que porque Esteban le dijo que se
Reconvenido por el alcalde de cómo escondiera, que venian á matarle.
hacia acatamiento al obispo si no sabia Tomáronle tambien declaracion á
si asistia ó no á la misa, contestó: Francisco, esclavo, y á Alonso, criado
Que como le vislumbraba detrás de del alcaide, los cuales manifestaron
una red por eso se lo hacia. ¿ nada sabian porque estaban de
Preguntado que cuanto tiempo ha icados, el uno al cuidado de las mu—
cia que conocia á la Juana, la esclava las del alcaide, y el otro á la limpieza
del alcaide, contestó: del castillo, únicamente declararon
Que desde todo el tiempo que de que veian hablar á Esteban y á Juana,
cia misa en la dicha fortaleza. la esclava, juntos en secreto, lo cual
Preguntado si la carta que le mos no estrañaban porque se decia que te
traba era de letra del obispo, y si la nian trato y se querian.
habia recibido de él; contestó que la Aquel mismo dia el alcalde Zárate
carta era del obispo; pero que no la tomó confesion á la esclava Juana. Pre
habia recibido de él, y que la Juana guntada acerca de Bartolomé Ortega, clé.
dria decir si era alguna de las que rigo, la muerte del alcaide, y la soltu
¿e, porque le parecia que no era ra del obispo, confesó: que habria tres ó
tan larga. Confesó que habia estado cuatro semanas, poco mas ó menos, que
en comunicacion con el criado Este el obispo le encargó que hablase con el
ban para tratar de la soltura del obis clérigo Bartolomé Ortega, y le dijese
po, pero que no habia concertado na que le escribiese; y ella asi lo habia
da 50bre el medio de salir, hecho, asi como con el criado Esteban;
DON ANTONIO DE ACUÑA. 67

y el Bartolomé Ortega y el Esteban le llamasen á Juana para que trajese una


dijeron que llevase una carta al obis candela encendida, y su señora la mu
po, que lo hiciese con gran secreto; y ger del alcaide le dijo, mira que llama
que ella asi lo hizo, y el obispo escri el obispo, lleva una candela; y la con
bió á los dos, á Bartolomé Ortega y á testó: válgate el diablo, ahora poco lle
Esteban; que despues la volvieron á. vé una candela, ¿para qué quiere otra?
dar segunda carta para el obispo: esta Y la primera luz que le llevó se la en
la entregó, y el obispo volvió á escri tró un niño del alcaide, y cuando le
bir á Bartolomé Ortega, entregándola fué á llevar la segunda candela se en
á estos; no habiendo vuelto á llevar contró con Leonardo Noguerol, hijo del
mas cartas para el obispo; ni de este alcaide, que le dijo: vé á saber qué es
para ellos. Que no sabia lo que conte lo que quiere el obispo. Que llegó al
nian las dichas cartas, que eran peque cuarto donde éste se hallaba, lo en
ñas, y venian dobladas y sin cerrar. contro cerrado, y llamó diciéndole:
Dijo que nada le habia dicho el obispo abra usía, y luego Leonardo le dijo al
acerca de las cartas que llevaba y traia, obispo: abra á esta moza, que quiere
sino que guardase secreto, y no lo di entrar á ver qué hace el alcaide, y á
jese á nadie. dónde está; y que el obispo respondió
Preguntada si habia llevado cartas al Leonardo: entrad, que está escri
á algunas otras personas mas, contestó: biendo vuestro padre, y firmareis el
que no. papel que está poniendo. En esto el
Preguntada por el alcalde quien le obispo se puso á la reja de la sala por
habia dado los cuchillos y las piedras la parte de adentro, y como le vió
al obispo, dijo que nada sabia, y que que tenia ensangrentado el zamarro le
no habia tenido parte en tal traicion. dijo Leonardo: ¡ay perro! que habeis
Preguntóla el alcalde quien habia muerto á mi padre: y entonces Nogue
quitado el hierro de la cama, y quién rol fué por una espada, subió al corre
se lo habia dado al obispo, y contestó dor, y al verle venir el obispo salió á su
- ¿ entrando donde dormia el ¿ encuentro con un baston que tenia en
esde el viernes antes de que sucedie la punta un hierro, y arremetió con él
se la muerte echó de menos el hierro á Noguerol. Asi, andando á revueltas
de la cama de campo que servia para entró ella á buscar el alcaide, le llamó
las cortinas de la cama, y halló las ar— y no le respondió á pesar de las mu
gollas de hierro encima de la cama; y chas voces que daba. Entonces salió,
preguntando á Leonardo Noguerol, hi diciendo que no lo hallaba á la muger
jo del alcaide, si sabia del hierro de la del alcaide, viendo al mismo tiempo
cama, le contestó que nada sabia. Es— que el Noguerol se iba por la escalera
tando comiendo el obispo, no sabe si abajo, y el obispo tras de él. Luego
el viernes ó el sábado antes de dicha fué con su señora á la cámara donde
muerte, el alcaide le dijo:—«¿Por qué dormia el obispo, y hallaron muerto al
no pones aquel hierro las cortinas?» alcaide.
Las huscó y no las halló; y el obispo Como habia varias indicaciones de
dijo que no corria prisa, y que dejasen que en la tarde en que don Antonio de
de poner las cortinas. Acuña habia tenido la conferencia con el
Habiéndola preguntado quién habia desgraciado Noguerol, y que habia sido
dado los clavos que el obispo tenia hin éste muerto, estaba todo concertado
cados en el baston, contestó que No ¿ la fuga, y se aseguraba que se ha
guerol para clavar unos santos en la ian visto hombres á caballo junto á
pared, y que se los habia pedido el las Fontanillas y por el lado de Feria,
obispo. que despues habian huido, se proce
Preguntada cuando mataron al al à. el dia primero del mes de marzo por
caide y daba voces dónde se encontra el alcalde Zárate á tomar declaracion á
ba, dijo que estaba abajo, que no oyó María Garrida, viuda, muger que fué
voz alguna, sino que ¿n t0CarOn de Diego Castellanos, mesonera, á Ma
la campanilla por la tarde despues de ría, criada de la citada mesonera, y á
comer, acudió el ama de cria y un nie Isabel, muger de Juan de Porras, sas
to del alcaide, y le dijo el obispo que tre; y de todas estas declaraciones, lo
º

(58 CAUSAS CELEBRES.

único que pudo sacarse en limpio fué Preguntado qué palabras le dijo que
que en la mañana del 25 de febrero vino habia de tener en matar al alcaide, con
al meson un vecino de Fuente Sauco, testó que ni en dicho ni en consejo se
el cual manifestó haber entregado al trató de la muerte del alcaide: que
alcaide una carta para don Antonio Acu esta era la verdad, como Dios bien
ña, y que se volvia con la respuesta. sabia.
Aquel hombre desconocido, y sobre El alcalde Zárate se trasladó nue
el que recaian ahora sospechas de com vamente á la presencia del obispo para
plicidad en el proyecto de fuga, habia exigirle su confesion; y éste le mani
sido artilleno en las tropas del obispo festó que sin él solicitar el apoyo de
durante la época de las comunidades. Bartolomé Ortega, éste se lo ofreció por
Era un hombre decidido por él, que no escrito en dos cartas; que el criado Es
se recataba de manifestar á todos el teban le escribió tambien una carta sin
sentimiento que le causaba la prision diligencia ni solicitud suya, y que él
del obispo, y que decia haber gastado les contestó agradeciéndoles su buena
en su servicio y obsequio mucha parte voluntad. Manifestó que Juana, esclava
de su hacienda, estando dispuesto á del dicho alcaide, era la que traia las
gastarla toda si fuese necesario. Mani cartas; que fueron dos, la una del clé
festó que habia encargado al alcaide rigo y la otra de Esteban.
que pusiera en su noticia que se ha Habiéndole puesto de manifiesto el
llaba dispuesto á ir á cualquiera parte, alcalde las cartas, dijo que parecia ser
á Portugal ó á cualquiera otro punto, la que Esteban le escribió, pero que
por largo que fuese el camino, sin exi no conoce su letra, y que le parece que
gir por esto ni una blanca ni un cor habra quince ó veinte dias mas ó me
nado, y que calculaba que de no valer nos se las escribió el capellan.
le ruegos ni oraciones jamás saldria el Habiendo leido la carta de Bartolo
obispo Acuña del castillo donde se ha mé Ortega, dijo: que tiene entendido
llaba. Que este hombre llevaba dos ca por algunas palabras de la dicha carta,
ballerías y unas alforjas, y en las ma especialmente de lo que dice en ella
nos unos clavos. de lo de la capilla, y descolgarse con
En el mismo dia 1.º de marzo el al sogas, y en lo que dice que esperase á
calde Zárate hizo comparecer personal que el emperador celebrase sus fiestas,
mente ante sí segunda vez al Bartolo le parece que es la carta del dicho Bar
mé Ortega, y volvió á leerle la carta tolomé Ortega, pero que no tiene cer
ue habia escrito al obispo, preguntán teza de su letra, porque no la ha visto
¿ si era suya, á lo que contestó ser escribir, y que le parece que la carta
verdad, y que se la dió al obispo por se la dió Bartolomé Ortega. -

la reja de la capilla haria unos quin Habiéndole presentado luego el al


ce dias. calde la carta que le escribió al cape
Preguntó el alcalde qué cosas eran llan, y que comienza «llermano, de
las que el obispo le habia escrito y le cuerdos es recelar,» y que hemos in
dijo, para que le respondiese lo que le sertado, contestó que le parecia ser su
respondia en ella, contestó que el obis ya, pero que si lo es que no lo sabe.
po le dijo que le favoreciese de manera aunque en las razones de la dicha car
que él se pudiese salir de la fortaleza, ta parece ser suya por algunas particu
y que en cosa de muerte no se habló iaridades que tiene, en especial de es
sino de la libertad del obispo; que esto cusarse de que él no habia de hacer si
es lo que le escribió, y le dió la carta no lo que buenamente pudiese, y le
como tiene dicho. pareciese decir á lo del ofrecimiento.
Preguntado cuál era la forma que el En cuanto á lo del cuchillo ó espada,
obispo daba para libertarse, contestó: que no se acuerda.
quo el obispo le dijo que cuando el hijo Preguntado si habia mandado dar
del alcaide llevase la luz, él se sal algun dinero á la esclava, contestó que
dria, y que entónces cuando él habló mal lo podia dar cuando no lo tenia, ni
con el obispo concertó todo lo conte tampoco á quien mandar que se lo diese.
nido en la dicha carta, aunque á él le Preguntado si habia escrito á algu
pareció imposible de verificarse. nas otras personas para que coopera
DONANTONIO DE ACUÑA. 6,9

sen á su libertad, contestó que á nin preguntó á Bartolomé Ortega y á Este


guna. ban quién enviaba aquellas cartas, y
Preguntado si Bartolomé Ortega y ellos la contestaban que eran ellos, por
Esteban tuvieron parte en la muerte que aunque no se ganase nada, no se
del alcaide, ó se la aconsejaron, ó ha perdia, y si llegaba á verse suelto el
bian hablado algo de ello, contestó que obispo les haria grandes mercedes. s.
ni palabra, ni escrito, ni pensamiento Preguntado por el alcaide quién la
sobre esto medió, ni con otro alguno, dijo que llevase guijarros escondidos
con Bartolomé Ortega ni Esteban; por para aprovecharse de ellos:
que Bartolomé Ortega siempre se es Dijo que no vió tales guijarros.
cusó y apartó, y protestó en no en Oidas las declaraciones de Francis
tender en cosa de muerte ó afrenta, y co Bravo, vecino de Simancas y de Die
asi lo habia aceptado él, escusándose go Mesoneros, que nada añaden á las
de intervenir en cosa de arenta per anteriormente prestadas por los de
sonal; y que al Esteban no le escribió, mas testigos, se procedió en el mismo
ni habló, ni envió á decir nada tocan dia átomar declaracion de Francisco Ta
te á la muerte del alcaide ni de otra vera, esclavo, el cual, si bien dijo que
persona ninguna. conocia á Bartolomé Ortega y á Este
El alcalde Zárate, el dia 2 de mar— ban por habla y conversacion, porque
zo, hizo traer á su presencia á la es estuvieron juntos en la fortaleza con
clava Juana, y la preguntó quién la ha el alcaide Noguerol, añadió que habrá
bia dado el dinero que se hallaba en su mes y medio que el Ortega comia y
poder, y contestó que Almesto, page dormia en la casa, porque enseñaba á
del alcaide, de edad como de diez y leer á los hijos del alcaide, aunque mas
nueve á veinte años, con el cual habia estaba el Ortega en la villa; y que Es
tenido trato amoroso, y que en diver teban era acemilero y hacia cinco ó seis
sas veces la habia dado varias tarjas, meses estaba con el alcaide y traia leña
las que guardaba, no acordándose de la escobas á la fortaleza. Que nunca vió
cantidad que hacian; y que al mismo blar á Ortega con el obispo, porque
tiempo tambien tenia trato con Fran tampoco entraba donde éste se hallaba
cisco el negro esclavo del alcaide, con á no ser en presencia del alcaide, y
el cual dormia muchas noches, y que esto cuando le traian regalos del obis
varias veces la dió hasta cinco ó seis pado de Zamora; que el obispo se ha
reales, los cuales guardaba en un arca llaba suelto en su cuarto dibujando y
que tenia en la fortaleza. pintando, y que solia decirle: Francis
Preguntada por el alcalde qué di co, hermano, vos no perdereis nada
¿ la habia dado Esteban el acemi si Dios me saca de aqui.
erO: Preguntado si conocia á Juana, es
Contestó que es verdad que tam clava:
bien tenia trato y dormia con el Este Contestó que sí, que estaba con ella
ban, por lo cual éste la habia dado dos en casa del alcaide, y aun ha dormido
gorgueras para ceñidores, un cordon, carnalmente con ella y la pagaba. .
unas cuentas, cintas y una sortija de Preguntado si sabia que el dicho
plata, y que la decia que la compraria Esteban dormia con Juana.
una toca para la Pascua, pero que di Contestó que sí, y que la Juana
neros no la dió jamás. siempre salia en defensa y, favor de
Preguntada que fué lo que la dió ó Esteban cuando mediaban palabras en
la prometió el obispo: - tre ellos por la particular amistad que
Contestó que el obispo no la pro le tenia, y que no sabia que Juana hu
metió ni dió cosa alguna, sino que Bar biese edia en el envio de las cartas.
tolomé Ortega y Esteban la decian cuan Batificadas las declaraciones ante
do la daban las cartas para el obispo y riores por el Bartolomé Ortega, y to
se las volvia, que no lo viese nadie y que mada declaracion á Bartolomé Raspela,
tuviese mucho secreto; pero que nunca el cual, despues de referir todas las
a dieron nada, ofreciéndola solo que circunstancias de la fuga del obispo,
añadió que el obispo, despues de pre
cuando el obispo saliese de la prision
la haria muchas mercedes, Que ella so, le dijo al referirle que habia trata
CAUSAS CELEBRES.

do de arrojarse por los adarves, que no hacerse del obispo Acuña, él que á su
opuso resistencia á los que fueron á carácter sagrado debia no haber pere
prenderle; «que si tuviera su palito cido, como habia perecido á la llegada
cuando llegaron á él, y que habia ar del emperador á España su compañero
rojado abajo, batallaran un poquito y de prision, en el mismo castillo de Si
verian lo que hacia cada uno.» Entonces mancas, Maldonado Pimentel.
él le preguntó porqué habia arrojado Necesitaba la córte un hombre que
antes el palo, y el obispole contestó que prescindiera de todo escrúpulo y se pres
cuando lo echó pensó llegar tan presto tase á la ejecucion de sus planes, y este
como el dicho palo abajo; pero que hombre se encontró en un antiguo ene
como vió la justicia de la otra parte, migo personal del obispo, el alcalde
por eso no se habia arrojado del muro de casa y córte don Rodrigo Ronquillo,
abaio. el cual fué enviado á Simancas de real
En este estado las cosas, el dia 13 órden con dos alguaciles y un escriba
de marzo mandaron los alcaldes en la no, á fin de que fallase sumariamente
visita de la cárcel notificar á la muger el procesod ejeeutase la sentencia; pa
de Mendo Noguerol, alcaide, si queria ra lo cual de paso por Valladolid tomó ,
acusar á Juana, esclava, de la muerte consigo al verdugo Bartolomé Zaratan.
del alcaide, que se presentase ante Generosamente recompensó el empera
ellos para acusarla, ó la defendiese co dor esta comision, señalando mil qui
mo á su esclava; lo que se la notificó nientos maravedises al dia al alcalde
con acuerdo en forma. Ronquillo, doscientos á cada uno de los
En el dia 4 se verificó esta notifi alguaciles, y ciento al escribano, que
cacion, y la viuda del desgraciado No fué Gerónimo de Atienza.
guerol contestó que ella no queria acu No bien se habia apeado de la mula
sar ni defenderá Juana, sino que los de paso en que habia llegado á Siman
alcaldes hiciesen jnsticia la mas cruel cas, el alcalde don Rodrigo Ronquillo,
que pudiese hacerse segun derecho el dia 20 del mes de marzo, cuando sin
contra los que hubiesen cometido la descansar ni un instante, se presentó
muerte de su marido. en la cárcel de la villa para tomar la
Asi se hallaba la causa, caminando confesion, acompañado de su escriba
el proceso lenta pero acertadamente, no, Gerónimo Atienza, al clérigo Bar
sin omitirse la menor declaracion que tolomé Ortega, que se hallaba pre
pudiese dar luz sobre el delito cometi so en ella. Comenzó el alcalde Ronqui
do, y en estado de que, nombrando un llo por enseñar al presbítero la carta
defensor al reo, pudiesen hablar el fis que habia escrito al obispo, y de que
cal y el abogado para poder pronunciar hemos dado copia, y con ademan fiero
sentencia los jueces. Estas formalida y el carácter que le era tan propio y
des judiciales, protectoras de la ino peculiar, trató de exigir á toda costa,
cencia, y que dan al sello de la justi amenazándole con el tormento, le mos
cia el carácter de una sentencia medi trase la carta á que esta era contesta
tada y no hija de la precipitacion y del cion, y en la que le decia le habia es
arrebato de un momento, no debieron presado cosas de tanta calidad y afren
¿ bien al emperador Cárlos V, al ta, exigiéndole dijese dónde tenia se
ombre que en las causas seguidas con mejante carta.
tra los que habian tomado parte en los El clérigo contestó que la habia que
movimientos de las comunidades de mado cuando la leyó.
Castilla, habia adoptado la fórmula bre ¿Por qué la quemó y no quemó las
ve y espedita de presentar el fiscal la otras que le escribió el dicho obispo?
acusacion, reconocer la identidad de Contestó ¿ el obispo no le habia
la persona y hacer que se ejecutase la vuelto á escribir.
sentencia. Asi, el ¿,la rígida y gra ¿Qué cosas son, le preguntó, las
ve mesura con que caminaban los al que escribió el dicho obispo en esta car
caldes de Valladolid, Zárate y Mencha ta que quemó, de peligro y afrenta?
ca, no encontró aprobacion en el ánimo Contestó que lo que escribia en ella
del monarca, que quiso aprovechar la el dicho obispo era, que cuando el hijo
ocasion que se le presentaba de des del alcaide fuese á llevarle una vela
DONANTONIO DE ACUÑA. 4

por la noche, que se saldria y enton llos en los pies, sujetas las manos con
ces él le favoreceria abriendo la puer esposas, delante de su antiguo prisio
ta y ayudándole á salir de la fortaleza. nero. Conocia su carácter audaz v ven
¿Cómo es, insistió el alcalde Ron gativo; conocia el malquerer y la vo
quillo, que no os escribiese otra cosa luntad del rey Cárlos V; consideraba
sino eso el obispo en su carta, y le di que no habia habido gracia para nin
jéseis que os mandaba cosas de tanto de los vencidos de la clase alta
peligro y afrenta? e las comunidades, y que únicamente
Lo dije, contestó Ortega, por lo que habian participado al cabo de mucho
me habia escrito de que cuando entra tiempo del perdon aquellos que des
se el hijo del alcaide, llamado para que pues de haber figurado en el alzamiento
llevase luz, dejaria á dicho hijo en popular, como Giron y Laso de la Ve
cerrado dentro de la cámara, y él se ga, en Toledo lo habian vendido. En
saldria y marcharia fuera de la fortaleza. su penetracion el obispo Acuña vió
Preguntado si tenian concertado ó que la llegada del alcalde , Ronqui
platicado Esteban y él, el modo con llo era mas la señal de cubrir con las
que habian de libertar al obispo de la ¿ jurídicas un asesinato que
prision: el de administrar y desagraviar la jus
Contestó que no tenia mas que ticia ofendida por él en la muerte del
decir. alcaide. Asi es que el desden y el
¿Qué personas estaban concertadas miedo que le inspiraba su juez y ene
para libertar al obispo de Zamora y de migo, se dejaba traslucir en el sem
qué modo? blante del anciano reo.
No lo sabe y nunca lo oyó decir. Presentóse aquel á exigir la confe
¿Cuánto tiempo hacia que no habia sion al obispo acompañado de su es—
entrado en el aposento de dicho obis cribano Atienza, y habiéndole recibi
po ó en la capilla donde decia misa el do juramento en forma, colocando el
referido obispo, despues que éste mató obispo las mands en el pecho y sobre
á Noguerol? -

la corona, juró por las órdenes sagra


unca entré, contestó, en el apo das de San Pedro y de San Pablo que
sento donde el obispo dormia, salvo en diria verdad en cuanto supiere y fue
la capilla donde decia misa, en la que re preguntado.
entraba todos los dias hasta que me Protestó vigorosamente que hasta
dijeron que el obispo habia muerto al entonces no habia prestado declaracion
alcaide. alguna, que solo habia espuesto su di
¿Qué cosas le pidió el obispo para cho en virtud del interrogatorio de los
matar al alcaide ó para salir de la for alcaldes de la chancillería con protesta
taleza? de no poder jurar como obispo en ma
Ninguna, contestó, ni nunca me di nos de seglares.
jo cosa alguna de dicha muerte, ni le Cambiaba desde entonces el tono
he dado cuchillo, ni piedra, ni otra ar de su conducta en su declaracion el
ma cualquiera para hacer dicha muer obispo ; tal vez conocia que estaba
te, ni tomado parte en su plan ni li juzgado, y que para nada serviria su
bertad, y no sabe cosa alguna de este declaracion. Asi es que preguntado so
hecho. -
bre la muerte del alcaide, contestó
Terminada esta confesion, la firmó decididamente que en ninguna hora ni
el clérigo Bartolomé Ortega. momento mató al alcaide de Simancas.
En aquella misma tarde el alcalde Preguntado el dia que llamó á Leo
Ronquillo se dirigió á la fortaleza y se nardo Noguerol, el hijo del dicho alcaide,
presentó en el cubo donde se hallaba para ¿ entrase en su cámara porque
preso su antiguo enemigo el obispo don su padre estaba escribiendo dentro de
Antonio Acuña; empero su entrevista ella, y le era necesario para que fir
fué esta vez muy diferente de la que años mase, requiriéndole para que dijese el
antes habian tenido en la fortaleza de dia y la hora que era:
Fermoselle Entonces Ronquillo se ha o sé que dia ni en qué hora pasó
llaba prisionero y á merced del obispo, todo eso que se me pregunta, contestó.
y hoy éste se hallaba aherrojado con gri Preguntado si cuando llamó á Leo
2 CAUSAS CELEBRES.

nardo estaba su padre dentro de su el cinto, y le cogieron los alcaldes, y


cámara vivo ó muerto, respondió: que tambien llevaba un palo que le lle
No llamé á Leonardo, ni su padre gaba al hombro, y puesto en dicho
estaba dentro. palo un cuchillo de escribanía, en la
Preguntado por qué pidió la vela y punta del cual le colocó cuando vió al
el dia, contestó: terado á Leonardo Noguerol, hijo del
No sé qué vela ni nada de lo que se alcaide.
IIl62regunta. * Preguntado qué alteracion vió en
reguntado qué dia quiso fugarse el dicho Leonardo que le moviese á
de la fortaleza, cuando lé cogieron en poner el cuchillo en el palo contra él,
las almenas, y si dejaba en su aposen contestó:
to al alcaide muerto ó vivo cuando de Que le vió con otro semblante de el
él salió, contestó: que solia, traer, y que creyó tener ne
No sé dónde quedaba el alcaide cesidad de hacer aquello.
cuando me cogieron en los adarves de Preguntado si estaba en tratos
la fortaleza. con el rey para arreglar su causa, con
Preguntado si habia estado el dia testó que su intencion era arreglar el
en que queria marcharse de la forta negocio por mediacion de su herma
leza el alcaide con él, respondió: no don Diego Osorio y el licenciado
No me queria escapar de la prision Montes.
ni aquel dia ví al alcaide en mi apo Preguntado qué cantidad ofrecia al
Sent0. rey por su parte para la libertad de su
Preguntado si entró ó vino con ar persona, contestó:
mas, contestó: Que su persona no tenia necesidad
Que no sabia si las llevaba el al de ofrecer un ducado por cosas conte
caide. nidas en las causas; pero que habia
Preguntado sobre qué habló con él, ofrecido veinte mil ducados al princi
y cuando mató al alcaide, dijo: pio, y despues, con ciertas condiciones
Que algunas veces habia hablado y promesas que se establecieron, se
con él sobre cosas de beneficios y re éstendió á sesenta mil ducados, porque
sultas de ellos; pero que entre ellos no con las demas condiciones se le acaba
habian mediado palabras que pudieran ba la cantidad.
producir la muerte, ni menos el dia Preguntado qué personas le pres
que le cogieron sobre las almenas. taban ó habian ofrecido darle el dinero
Preguntado si el dia que le cogie para esto, contestó:
ron, que queria fugarse por las alme Que de su ciudad pensaba sacar
nas, estuvo luchando con el alcaide pa arte de la cantidad, y que le habian
ra reñir y matarle, echo ofrecimientos generales muchos
Contestó que no. deudos y amigos del obispado de Búr
Preguntado qué sangre era la que gos y Zamora, con los que contaba, y
tenia en el paño del zamarro que ves con su hacienda, que era muy buena,
tia y cómo estaba alli, contestó: arrendando con un año de antelacion
ò.
ignoraba de donde provenia, y los beneficios suyos.
quo en el dia que le prendieron, ni en Preguntado qué personas son las
los anteriores se lo habia puesto. que le habian prometido prestar y con
Preguntado con qué vestido iba el tribuir á su arreglo, contestó:
dia que le cogieron en las almenas, dijo: Que el arzobispo de Toledo, el du
Que no iba en trage de zamarra, que que de Nájera, el condestable de Cas
llevaba un mongil largo, que ahora te tilla, y en Portugal un obispo, herma
nia puesto, con un bonete de cualteras, no de Alba Perez, y el arzobispo de Lis
con unas pantuflas cerradas por de boa; y que aun cuando tenia confianza
trás, pues no tenia otras. en otras muchas personas que le pres
Preguntado qué armas llevaba cuan tarian, no recuerda ningun otro que le
do se quiso arrojar por las almenas, hubiese hecho ofrecimientos.
contestó: -
Cuando arrojó el palo que llevaba
Que no llevaba mas armas que un desde las almenas abajo y se queria es
cuchillo de cortar pan que llevaba en capar ¿llevaba alguna otra arma?
boN ANTONIO DE ACUÑA. 73

No llevaba mas arma que un cuchi bia dormido en dicho cubo donde aho
llo pequeño de mesa atado al cabo del ra estaba la sangre.
astal con una agujeta, y no recuerda Preguntado de qué era el reguero
si lo encontraron los alcaldes cuando de sangre que se hallaba en el cubo,
le prendieron ó se cayó alli. que es su aposento, y donde tiene la
¿Donde teníais el cuchillo? cama,
Contestó que lo llevaba en el cinto. Dijo que no sabia mas que lo que
Entonces el alcalde se le enseñó, habia dicho.
y dijo: que le parecia que era aquel, Vuelto á preguntar por el alcalde
pero no lo sabia con seguridad, y que Ronquillo si habia visto la sangre que
estaba atado como este mismo con un aparecia en dicho cubo antes de la
trapo en el mango con una agujeta. muerte del alcaide,
Preguntado si cuando le subieron Contestó que no sabia que antes
arriba no se habia lavado las manos hubiese sangre ni ahora, que él no las
que llevaba manchadas de sangre, con vió allí, y que estas manchas no se
testó con algun desenfado: sabe si son de sangre ó de cualquiera
Que no tenia memoria de ello ni lo otra cosa; que esta es la verdad única
recordaba mas que las nubes de anta que puede decir bajo el juramento que
ño; que podria ser que tuviese sangre ha prestado.
en las manos de un golpe que se dió Preguntado si sabia quién mató al
en la puerta de la red al salir por ella alcaide ó quiere probar quién lo mató,
Leonardo, y en las almenas, cuando Dijo que no sabe quién lo mató; pe
estaba en ellas, con los clavos del bas ro que sabia que habia muchos que con
ton que llevaba; pero que si los alcal mas motivos que él pudieran haberlo
des de villa dicen que se las lavaron, hecho. -

verdad seria, mas que no se acuerda. Interrogado que quiénes son esas
Inmediatamente el alcalde Ronqui personas que dice que podrian tener
llo hizo examinar delante del escriba mas causas que él para matarle,
no el cubo y aposento donde estaba el Respondió que sus esclavos y es—
obispo para ver si habia sangre donde clavas tenian enemistad con él por los
se halló muerto al alcaide, y procedie malos tratamientos que les daba, y que
ron á este exámen con una hacha en á uno, llamado Francisco, le habia he
cendida, y viéronse por muchas par cho esclavo sin serlo; y añadió que los
tes manchas de sangre esparcidas por parientes del mariscal de Navarra es—
el cubo y aposento del obispo, y muy taban muy mal con él.
especialmente un reguero grande deba El alcalde le preguntó entonces si
jo de una estera, y la parte de las pare queria probar que mató al alcaide al
des del cubo y cerca de la cama donde guna de aquellas personas ú otras.
el obispo dormia, y tambien en un pie Contestó que no; pero que probaria
de la espresada cama, donde se cree que las causas que tiene dichas que con
ató al alcaide. curren en otros, y hacen presumir que
Preguntado entonces el obispo si fuesen ellos mas que él; y añadió que
dormia en aquella cama y usaba aque él, como obispo, suponia que se le con
lla ropa donde aparecia estar la sangre, cederia la apelacion al papa y á S. M.
Contestó que dormia en aquella ca por cualquier agravio que recibiese, y
ma y usaba de aquella ropa, pero que pedia justicia al rey y al alcalde la co
no sabia de quien es la sangre que se pia de lo procesado, y le rogaba que no
vió junto á él, ni quién mató al alcaide; tomase declaracion para la informacion
y que podria muy bien ser que no fue de este negocio á personas sospechosas
ra sangre las manchas que se veian, y y enemigas de él.
que aquel aposento no era suyo de dia Terminada esta confesion, le man
sino de noche, que durante el dia se dó el alcalde firmar, y entonces el obis
hallaba muy desviado de aquel cuarto. po lo hizo, añadiendo de su puño y le
¿Cuándo sucedió la muerte del al tra que no escribia ni decia cosa de lo
caide dormia en el dicho cubo? dicho por ser obispo y ser prohibido á su
Contestó que todo el tiempo que voluntad, haciéndolo solo por obedecer
habia permanecido en la fortaleza ha el mandato del Señor " e; y firmó
T0Mo I.
-
CAUSAS CELEIBRES. "

con su firma ordinaria, A.ZAMon ENsis. dedo por la parte de adentro, el cual
Todavía no dió por terminada la ahora llevaba con un trapo atado. Que
confesion el alcalde Ronquillo, y le di despues le dieron agua, y el obispo se
rigió las siguientes preguntas: lavó la sangre.
Le enseñó un brasero, y le pregun Preguntó el alcalde Ronquillo al de
tó si lo tenia en el cubo, donde ahora Simancas qué habia oido decir al obispo
está, el dia que dijeron que habia muer despues que se habia lavado las ma
to el alcaide. nos, y contestó que habia preguntado
Respondió con bastante mal modo al obispo por que habia muerto al al
que no sabia si lo tenia aqui, donde caide, y que el obispo le habia res
ahora está ó en Sevilla. º que quién decia que le hu
El desenfado y desden con que con iese muerto ? que le habia muer
testaba al alcalde, no impidieron á éste to su mal genio, su condicion y lo im
el continuar en sus reconvenciones y portuno que estaba siempre con él
reguntas. Asi es que despues de ha para que diese á uno de sus hijos cier
¿ hecho examinar el brasero y la ca to beneficio habiéndole insultado y
ja de madera, que parecia estar man dirigídose contra él como para matarle,
chada de sangre por la parte de albajo, y no pudo menos de defenderse dán
volvió á preguntarle de nuevo, y el dole algunos pinchazos con el cuchillo
obispo volvió á responderle: en las manos y en la cara, pero que
Digo lo dicho con la protestacion no eran heridas para que pudiese mo
dicha., rir de ellas, antes bien que se habia
Despues los alcaldes de la villa de maravillado que de aquello hubiera
Simancas trajeron al alcalde Ronquillo podido morir el alcaide.
dos cuchillos, uno mas pequeño que Al dia siguiente 21, doña Constan
otro y de escribanía, revuelto el astil za Espinosa, viuda infeliz del desgra
con un trapo sucio y atado con una ciado Noguerol, presentó al alcalde
cinta. Este trapo parecia estar lleno de Ronquillo un zamarro que dijo llevaba
sangre, y declararon que lo habian co vestido el obispo el dia que mató á su
gido al obispo al tiempo de prenderle marido, el cual parecia estar en la
cuando queria arrojarse por las alme manga izquierda manchado de sangre,
nas abajo. El otro cuchillo, algo ma y examinado por el alcalde Ronquillo á
yor, de mesa, tambien revuelto el man presencia del escribano, y siendo tes
go en otro trapo sucio atado con una tigos los dos alguaciles que le acompa
agujeta, parecia estar con sangre en el ñaban en comision, les pareció que
puño y agujeta que le sujetaba. Este efectivamente, estaba manchada de
cuchillo se encontró en la manga de un sangre la manga izquierda del dicho
zamarro que acostumbraba á usar el ZaIIld I'I'0.
obispo. Tomó Ronquillo el cuchillo y lo Ilizo comparecer entonces al obis
entregó al escribano. po y le presentó el zamarro pregun
El alcalde Ronquillo procedió á to— tándole si era suyo.
mar declaracion á Alonso Ruiz, alcalde El obispo contestó que llevaba un
de Simancas, el cual declaró que ha zamarro parecido al que le enseñaba
llándose en la plaza, y al oir voces de cuando Leonardo Noguerol, hijo del al
que se fugaba el obispo de Zamora, caide se dirigió contra él con la espada
corrió con varias gentes á la fortaleza desenvainada; pero que no sabe si es
echando por la parte de afuera, mien aquel el zamarro que veia entonces; y
tras que el otro alcalde, su compañero, añadió que aquel zamarro ó cualquiera
fué por la de dentro, y vió al obispo en otra cosa que le enseñasen en aquel
el adarve, que se queria arrojar por las tiempo que haya estado en la fortale
almenas abajo. Que llegaron otros por za, las tiene por sospechosas.
la parte de adentro, le cogieron, impi Entonces le preguntó el alcalde que
diendo que se arrojase, y le llevaron pues tenia vestido dicho zamarro el
preso á la fortaleza, donde le pusieron dia que dice que le acometió Leonardo
unos grillos; que vió estaba ensangren Noguerol, cómo se lo quitó, en dónde
tado, pero no vió que tuviese ninguna y por qué. º -

herida, á no ser un poco desollado un A esto contestó, que despues que


D0N ANTONIO DE ACUÑA. 75

vino el dicho Leonardo contra él, cree - Preguntado cuanto tiempo hacia
que lo dejó en la sala de su aposento y antes de la muerte de alcaide que tu
se mudó dentro de otro cuarto donde viese puestos los trapos en el cuchillo,
duerme, que cogió un cuchillo como Respondió que lo hizo al ver á Leo
tiene dicho, y no se acuerda si lo dejó nardo y entonces lió los trapos, pero
en la sala ó en el corredor. que no habló á Leonardo las palabras
Preguntóle el alcalde como habia que tiene dichas, sino mantengaos
podido caer la sangre que tenia dicho Dios. Que no sabe que palabras dijo
zamarro hácia el hombro. N Leonardo pues estaba sofocado.
Respondió que no podia satisfacer Preguntando que pues aparejó el
sobre esto, que tenia por sospechoso cuchillo despues que hubo visto a
al zamarro, y que le salió sangre de Leonardo como se disponia si no habia
las manos por diversas partes, lo cual oido palabra ninguna ofensiva,
debieron ver la sangre reciente los al Contestó que por las señales de al
caldes de la villa y un barbero que le teracion que habia notado en el gesto
curó. -
y en sus ademanes.
¿Qué heridas teníais entonces, le Interrogado cuando preparó el palo
preguntó Ronquillo, y quién os las de la varilla de hierro en el que colocó
hizo? el cuchillo.
Contestó que se habian curado las Volvió á repetir que cuando habia
que tenia en las manos. visto á Leonardo tan irritado.
llízole el alcalde Ronquillo presen Entonces le hizo observar el alcal
tar las manos y solo apareció en un de Ronquillo cómo habia podido pre
dedo de la mano izquierda un poco de parar aquel instrumento en tan poco
magullamiento que se estendia hasta tiempo
la cabeza de él. Contestó que porque habia tenido
Preguntado qué ropa traia vestida tiempo suficiente desde que habia vis
el dia de la muerte del alcaide, ade to la irritacion de Leonardo Noguerol.
mas del zamarro que se quitó, Preguntado si el mongil, que ahora
Contestó ¿ un mongil sin man llevaba vestido debajo es el que tenia
gas, el cual nabia tenido mangas y entonces, y es el que habia traido en la
acia dias que se las habia quitado, y fortaleza,
que era el vestido que llevaba debajo. Contestó que trajo dos mongiles y
¿Por qué las quitasteis? alli se habia hecho uno, y que no sabe
Contestó que hacia muchos dias. si es este el que le dieron en lugar del
Preguntado por el alcalde si lleva otro, ó si es el que trajo de la fortaleza
ba metido en la manga de dicho mon de Navarrete. -

gil un libro y una , piedra con la que Preguntado si habia cortado de lo


dió golpes al alcaide, largo el dicho mongil,
Dijo que la piedra por la que le Respondio que si.
preguntaba no estaba metida sino en ¿Por qué le cortó?
un cuero de valdrés y que la tenia Dijo que le incomodaba, y hacia tres
para moler ciertos colores para las pin ó cuatro meses que le habia cortado,
turas de que se ocupaba. no recordando el tiempo.
Enseñóle Ronquillo el cuchillo mas Interrogado qué hizo de la tela que
¿ liado su mango en trapos de cortó.
ienzo ensangrentados, y contestó que Contestó que la tenia junto á unos
no conocia mas cuchillo que el que libros. - -

habia dicho y que todos los demas los Preguntado quién la cortó,
tiene por sospechosos. Respondió que nadie sino él, y por
Interrogado por qué causa ató el que le embarazaba quitó un poco del
al cuchillo que habia recono paño de la falda por el peso que le da
Cl (10, ba tanta ropa.
Contestó que para defenderse de Entonces el alcalde Ronquillo le hi
Leonardo Noguerol por los motivos zo observar qne mas peso que aquella
que tenia y al ver lo irritado y altera ropa le daria el zamarro que llevaba
lo que estaba, encima,
CAUSAS CELEII Es.

El obispo contestó que le impedia que Leonasdo vino á la reja y le dijo:


dSCd". «perro, muerto has á mi padre, » hasta
Mostróle el alcalde Ronquillo el pa que volvió con la espada desenvainada,
lo clavado en la varilla de hierro con Contestó que no es verdad le dijera
un cuchillo de escribanía á la punta. semejantes palabras, y que pasaria una
Contestó que le parecia ser aquel el media hora desde que llegó hasta que
que tenia el dia de la cuestion con No tornó con la espada desenvainada, y
guerol, porque tenia la varilla y clavos que esto era la verdad.
del cuchillo incados en él. Y cuando Habiéndole mandado firmase la de
vió que tenia alguna sangre en muchas claracion el alcalde Ronquillo, escribió
partes el palo, volvió á decir que si era el obispo de su puño y letra al tiempo
este ú otro no lo sabe, repitiendo que de firmar la frase que siempre tenia
de su voluntad no es confesante, sino mucho cuidado de repetir y consignar
respondiente al mandamiento de dicho en sus declaraciones, á saber: esto fir
alcalde. mo, no confesando sino respondiendo por
Mostróle entonces éste el saquillo mandado de dicho señor alcalde. A. ZA
de cuero que parecia bolsa de brevia MORENSIS.
rio, y dentro del cual habia una pie El dia 21 el alcalde Ronquillo hizo
dra lisa de guijarro, que pesaria unas comparecer á presencia del obispo á
dos libras, preguntándole si la tenia todos los testigos que habian declarado
en el cuarto donde estaba entre dia ó en la pesquisa que contra él habian
donde dormia. hecho los dos alcaldes de la chancille
Contestó que la tenia donde estaba ría Zárate y Menchaca, para que se ra
entre dia, y le servia para sus pintu tificasen en su declaracion.
ras y laborcillas, especialmente para Asi lo hicieron; empero el obispo
cosas que tenian necesidad de que— en aquel mismo acto requirió al alcal
brarse y para que no saltasen fuera. de que los testigos que se habian rati
Preguntado en qué molia los co ficado con juramento en su presencia,
lores, -
no hacian fé, porque fueron reconocir
Contestó que en unas escudillas dos sin verlos jurar él para que hubie
grandes de barro. se espuesto lo que convenia á su dere
Preguntado por qué tenia aquella cho, y que asi protestaba que no va
bolsa en que estaba la piedra, que le liese esto, y que se le diere copia de
enseñaba, sus nombres para alegar contra ellos lo
Respondió que alli llevaba un libro que á su derecho mejor pudiere conve
pequeño. nir, y especialmente los que se halla
Interrogado qué causas habia teni ron haciendo de hecho contra él mu
do Noguerol el jóven para dirigirse á chas cosas injuriosas, injustas en la
él airado y por las que él conociese el prision, tan enormes como las habian
estado en que le veia, ejecutado siendo legos, y que pedia
Dijo que no sabe que hubiese mas principalmente al alcalde que se le
negocios sino el de la pretension de los diese copia para protestar contra ellos.
beneficios. -

El alcalde Ronquillo se limitó á con


Preguntado qué palabras le dijo No testar que oia la protesta, l. mandó po
guerol de enojo, nerlo por diligencia, siendo los únicos
Contestó que le envió á decir pala quina.
testigos los alguaciles Fanegas y Es
y.
bras con su hermano Alonso Noguerol
y con otro page, llamado Almesto. Habiendo hecho retirar al prelado
Preguntado que pues habia visto á el alcalde Ronquillo, hizo comparecer
Noguerol otras varias veces, cómo ha á Juana, esclava del alcaide Noguerol,
bia conocido en él aquella alteracion y teniendo á su lado al verdugo de Va
para prepararse con armas contra él, lladolid, Bartolomé Zaratan, que era
Respondió que la causa no era nuo una de las personas con quien habia
va, por lo de los beneficios, y que co— venido desde el primer dia á Siman
noció que tenia necesidad de precaver cas, preguntó á aquella pobre muger,
se contra su irritacion. aterrada con la presencia del alcalde,
Preguntado qué tiempo pasó desde y mas que nada con la siniestra figura
DONANTONIO DE ACUÑA. 77

del verdugo, que le dijese qué era lo Ronquillo, dijo que era aquel mismo.
que tenian concertado el obispo de Za— Preguntada qué palabras dijo el
mora, Bartolomé Ortega y el criado Es obispo á Leonardo, -

teban para matar al alcaide. Contestó que habia dicho: entrad


Contestó la esclava que viendo un aquí que está vuestro padre, y firma
dia hablar al clérigo con Esteban, les reis un concierto que yo tengo con él.
¿ de qué se trataba, y vió que Y entonces el Leonardo dijo al obispo;
ablaban sobre unas cartas que pensa vos don traidor, muerto habeis á mi
ban enviar al obispo, y entonces ella padre. A poco vino Leonardo con una
se ofreció á llevarlas, y la dieron una espada desenvainada en la mano, é iba
carta para el obispo y que la entregó; á dar con ella al obispo, y el obispo á
y que otra vez le llevó otra carta por él con un palo: que Leonardo salió hu
mandado del mismo, y el obispo no la yendo á toda prisa, y el obispo corria
dijo ni prometió cosa alguna. tras él con el arma, y luego ella se
¿Cuándo dió las demas cartas, la reunió con su señora: que dijo al dicho
preguntó el alcalde, dió parte de ello obispo: ¿qué has hecho? ¿has muerto al
al alcaide, ó á su señora, ó á alguno de alcaide? y entonces el obispo la dijo
la casa? que callase, que la daria muy bien de
Contestó: que no. comer, y que se marchó para abajo á
Entonces Ronquillo la requirió pa— huirse, y le cogieron en la dicha forta
ra que le dijese la verdad de cómo ha leza; y antes que le subiesen arriba,
bia pasado la muerte del alcaide, por— la muger del alcaide y ella y otras mu
que iba á aplicarla al tormento, y que geres entraron en el cuarto donde dor
si algun miembro se le quebrase ó mu mia el obispo, y vieron en él muerto al
riese la culpa seria suya. alcaide junto á la cama, y al tiempo
Aterrada la muger contestó que que llevó la candela al obispo tenia és
nada sabia. te un zamarro vestido, y cuando salió
Entonces el verdugo ató los pies tras de Leonardo habia dejado el za
de la esclava con un cordel de cáña marro junto á la celosía ó red de ma
mo á una piedra y una soga que suje dera, que estaba junto á la sala del
tó en una garrucha con una pieza de obispo.
hierro atada con la espresada piedra á El alcalde Ronquillo volvió á re
á los pies, que pesaria hasta unas querirla de parte de Dios y del rey que
cien libras, y por detrás la ató á las dijese la verdad de cómo pasó la muer
espaldas fuertemente con un cordel. te y quiénes fueron los cómplices, y
El alcalde Ronquillo la preguntó si haciendo una seña al verdugo, tiró és
dormia con Esteban, y si era su te de la maroma arriba por la garru
amante. cha, elevando á la esclava, y Juana dió
Respondió que con él dormia y no grandes lamentos; y habiendo bajado,
llevó mas cartas que las dichas. dijo que cuando daba las cartas al obis
Preguntada si cuando llevó la ve— o, él la decia que la haria mercedes.
la al cuarto del obispo vió muerto en Preguntada qué decia el clérigo
el "¿ al alcaide. cuando le entregaba las cartas del
ontestó que su ama la habia di obispo,
cho: el obispo te llama para que lleves La dijo que éste la daria libertad.
una candela encendida, y ella la llevó Preguntada qué mas dijo el clérigo
y estaba cerrado el cuarto de la sala, á Esteban,
y se la dió por la reja; y que luego Contestó que nada sabia.
llegó con Leonardo Noguerol, hijo del Entonces volvieron á subirla otra
alcaide, que dijo al obispo que abriese vez, levantándola los pies del suelo, y
la puerta; que la abrió y entonces ella empezaron á descoyuntarse sus miem
entró en la sala y no en el otro cuarto bros, y el alcalde la requirió que dijese
donde dormia el obispo, dijo: Ay, la verdad. Volvieron á bajarla al suelo
señor, que no está aqui el alcaide y casi amortecida y sin sentido, y con
luego el obispo salió contra Leonardo entrecortadas palabras dijo que ella ha
Noguerol con un arma á modo de palo; bia dicho al obispo que bien podia
y habiéndosela enseñado el alcalde fiarse de ella y que no hablase al clé
78 - CAUSAS CELEBRES.

rigo por la reja de la ventana porque procurase medio de librarlo. Entonces


sospechaban de ella. él le respondió que cuando durmiese
Volvieron tercera vez á subir á la el hijo del alcaide le abriria la puerta
desgraciada esclava, volvieron á des y asi se podria marchar; y asimismo le
garrar sus miembros, y al bajar y ser favoreceria en lo que pudiese en su
preguntada por el alcalde Ronquillo, salida, y como ya tiene declarado el
ya no pudo responder: un cruel des obispo le escribió, y que en la carta le
mayo se habia apoderado de ella: esta decia que cuando el hijo del alcaide
ba como muerta. Fué necesario des fuese á traerle una luz, le dejaria en
atarla y quitarla del tormento, consig cerrado y se marcharia: y por eso con
nando en la causa esta diligencia con testó al obispo que no le mandase co
todos sus terribles pormenores. sas de tanta afrenta
Ronquillo hizo despues traer á su Preguntado qué le prometió el obis
presencia al clérigo Bartolomé Ortega, po por favorecer su salida y por la
â siempre á presencia del verdugo, muerte del alcaide,
ispuesto á atormentarle para arran Contestó que no dió paso alguno
carle una confesion, le requirió que di para aconsejar la muerte del alcaide,
jese la verdad, apercibiéndole y pre ni sabe mas que lo que dicho tiene.
viniéndole que iba á darle tormento, . El alcalde Ronquillo volvió á ha
y que si moria ó algun miembro se le cer otra seña, tiró de la cuerda el ver
quebrase, seria por su culpa y no por dugo Bartolomé Zaratan, y volvieron
la, de aquel. Mandó inmediatamente á atormentar al infeliz clérigo. Volvió
ponerle en el tormento, en el mismo sele á bajar; era necesario darle algun
en que habia estado la esclava, con la respiro para que pudiese volver en sí
misma piedra y el peso de hierro, ma de los atroces dolores, porque se le ha
nifestándole que le daba tormento con
bian descoyuntado los miembros. En
forme á la órden que tenia de S. M. tonces le preguntó de dónde era y qué
Volvió á requerirle que dijese la ver tratos ó conexiones tenia con el obispo
dad, y contestó que no sabia mas que Contestó que era de Bamba y que
lo que ayer habia dicho ante el mismo no tenia parentesco ni conocimiento
señor alcalde, y el otro dia ante el al alguno con el obispo mas que lo que
calde Zárate. habia dicho, volviendo á decir que le
Entonces, á una señal del alcalde habia escrito al obispo lo que aparecia
Ronquillo, tiró el verdugo de la cuer en la carta.
da y subió un poco arriba los pies del Preguntado que como habia de fa
suelo. Empezó á lamentarse y dijo que vorecer al obispo, - -

diria la verdad y que le bajaran, y Respondió que como habia manifes


luego le bajaron. Puesto ya en el sue tado para que pudiese salir cuando es
lo, repitió que no habia mas que lo que tuviese dormido el hijo del alcaide
ya habia dicho. Mandó entonces el alcalde Ronqui
A otra nueva señal del alcalde, tor llo volver á tirar de la cuerda y se le
naron á subir en alto los pies hasta subió otra vez en alto, y entonces le
poco mas de una vara, y no subie requirió de nuevo dijese la verdad.
ron mas arriba, y en aquella terri Dijo que nada mas sabia que lo
ble posicion le preguntó el alcalde có— que dicho tenia.
mo habia concertado matar al alcaide Entonces le mandó bajar al suelo,
y dar libertad al obispo. Entretanto le desataron los pies de la piedra y le
exhalando contínuos ayes, contestó que quitaron del tormento.
ningun concierto habia mas que lo que Tan malo, tan quebrantado quedó
habia dicho en la confesion anterior. de éste, que no pudo firmar la diligen
Preguntado qué personas mediaron cia de la confesion que habia prestado
en hecho ó consejo para la dicha muerte en el tormento.
y libertad del obispo, En aquel mismo día habiendo vuel
Contestó que no hay mas que lo to á ver al obispo Acuña el alcalde
que dicho tiene; y que un dia que ha Ronquillo, acompañado de su escriba
bló al obispo Acuña por la reja, le dijo no reprodujo la diligencia de pregun
éste la mala vida que le daban y que tarle si queria probar que el alcaide,
1)ONANTONIO DE ACUÑA. b

al tiempo que él le mató, le habia aco— y á S.M. el emperador, á cuyo cargo


metido. estaba amparar á los eclesiásticos y
Entonces el obispo volvió á contes prelados de las justicias, y que daba
tarle que no, por ahora, y que le supli por nulo todas las dichas causas que el
caba le diese libertad para decir lo alcalde formaba al presente.
que quisiese, manifestándole que todo Preguntado por el alcalde Ronqui
lo que pasara por escrito ó de palabra llo si cuando habia hecho la muerte
desde que fué preso nuevamente por del alcaide tenia alli una alfombra (que
lo sucedido entre Leonardo Noguerol le manifestó), y si estaba contínua
y él, y que habian consignado en el mente en su cuarto de dormir,
proceso los alcaldes Menchaca y Zára Contestó el obispo, que algunas
te, era nulo, y que por tal lo daba por veces la vió en él; pero que el dicho
estar tan atemorizado y en contínuo dia en que pasó la contienda con No
tormento, que todo habia sido obra de guerol, si estaba alli, no lo sabia.
la fuerza y el justo miedo, y que por lo Hízole firmar esta diligencia el alcal
mismo daba por nulo lo que al presen de Ronquillo y el obispo lo hizo con fir
te el señor Ronquillo hacia y mandaba meza, añadiendo siempre de su puño
hacer, por estar asimismo atemoriza y letra: con , la protestacion dicha
do y apremiado, ya , con el respeto de no como confesante y por mandado é
su persona, ya con las palabras que le no mas.-AZAMoRENsis.
habia dicho, y que protestaba libre El dia 22 de marzo muy de maña
mente para que le dejasen decir sin na, el alcalde Ronquillo hizo llamará
p rision, como corresponde en derechoá
9 la estancia en que se hallaba preso el
toda causa, especialmente en la de un obispo, á Juan Gonzalo de la Puente,
obispo, y en causa criminal; preten barbero, vecino de la villa de Siman
diendo que el dicho alcalde forme jui cas, y le preguntó á su presencia qué
cio libre con lo dicho y por estar en la era lo que sabia de la muerte del dicho
causa personas tan sospechosas contra alcaide, quién le mató, y qué habia
rias á su vida y libertad, mandando que habido sobre quererse escapar de la
dé por nulo cuanto él hubiese hecho, prision el obispo, y si sabia quién le
por efecto de la fuerza y del tormento. habia dado apoyo y ayuda para ello.
Pidió tambien que se le concediese un Contestó el barbero que lo único
letrado y procurador segun requiere y que sabia era ¿ el domingo por la
manda el derecho, y que antes de que tarde se habia dicho en la villa que el
se entienda en su causa, se provea sea obispo de Zamora se escapaba, y que
restituido en sus bienes espirituales y habia muerto al alcaide, y que él en
temporales de que se le habia despoja tonces, con otra mucha gente, corrió á
do, y que sea asimismo nulo, como el la fortaleza donde estaba preso, y que
derecho requiere, todo, no procediendo cuando llegó ya le habian cogido y le
la dicha restitucion y bienes. Con la iban á echar ¿? cadenas: que es
dicha protesta requirió el obispo al al tando alli el obispo dentro de una pie
calde, manifestándole que diria con za que está junto al cubo donde dor
claridad evidente y concluyente lo de mia, le preguntaban todos que cómo
los cuchillos. habia muerto al alcaide, y que le ha
Erronces el alcalde manifestó al bia oido decir entre otras cosas que
obispo que ya lo tenia dicho con cla habia sido por las disputas que habian
ridad y manifestado en sus confesio— tenido; que habian andado luchando,
nes y que con esto se satisfacia sin que que aun cuando el alcaide era hom
mas declarase. re corpulento, no era mañoso como
Pidió ademas el obispo que ante él, por lo cual le habia derribado en el
todas cosas le manifestase copia de los suelo, y le habia atado y le habia pedi
testigos que en aquella mañana habia do pleito homenage de que le dejase es
mandado venir á declarar, asi como caparse, el cual se lo habia prometido;
de lo que habia dicho anteriormente, que despues volvió á dar voces y en
para que segun derecho y con la pro tonces se habia dirigido á él con un cu
testa que tenia hecha, se sometiese to chillo y le habia hecho una herida, no
do bajo la protestacion á Su Santidad para matarle, porque no pensaba que
S0 CAUSAS CELEBRES.

estuviese muerto de ellas, que nunca él porque sino le pondria á cuestion de


habia sacado sangre á nadie, ni á él se tormento. Que en cuanto á haber muer
la habian sacado hasta entonces; que le to al alcaide, no le preguntaba cosa al
habia dado aquellos pinchazos porque guna ni se lo queria preguntar.
le insultaba. Aseguró tambien que ha Entonces el obispo, C01 IrldS Ser'e
bia oido decir al mismo obispo que Leo nidad de la que podia suponerse en un
nardo Noguerol, hijo del alcaide, se ha hombre de su avanzada edad y á la vis--
bia dirigido á él porque le habia llama ta de los instrumentos del tormento,
do, y que con una espada le habia tira le contestó: ni persona de casa, ni de
do unas estocadas, y que entonces ha fuera, ni del cielo ni de la tierra, fue
bia cogido un palo con una varilla de ron conmigo en ningun concierto sobre
hierro, habia corrido detrás de él, y lo dicho, y si alguno lo pareciera, no
que como era mozo habia ido huyendo es verdad.
y corria mas que él, y que de haberle Entonces mandó Ronquillo al ver
alcanzado de seguro no se encontraria dugo Bartolomé, que atase los pies al
alli preso. Dijo tambien que habia ob— obispo, teniéndoselos sujetos con una
servado que el obispo tenia las manos cadena, y colocara en ellos una pesa
manchadas de sangre reciente, habién de hierro bastante grande, la cual pe
doselas visto lavar. Notó tambien el saria hasta unas cien libras (cuatro ar
zamarro del obispo ensangrentado con robas). Estando en esta aflictiva situa
sangre reciente, y que antes de esto cion, volvió á insistir Ronquillo en su
habia entrado en el cubo donde dor— anterior pregunta. A ella contestó el
mia el obispo, y alli habia visto al al obispo que lo que habia dicho era la
caide tendido en el suelo lleno de san verdad, y no sabia otra cosa, y que
gre, apuñalada toda la cara y llena de puesto como se hallaba en el tormento,
ceniza, cubierto con una alfombra y por miedo á él, diria cuanto supiese y
un brasero, junto al cual se hallaba una no supiese.
luz apagada. Que las heridas estaban El verdugo tenia fijos los ojos en los
por la cara, por la cabeza y una por la del alcalde, y á una señal de éste le
garganta, pareciéndole hechas con un ató las manos detrás por las muñecas
cuchillo pequeño, de lo que él tiene con un cordel. -

esperiencia por ser barbero, viendo ¿Qué dineros teneis, le preguntó el


tambien la cama ensangrentada y las alcalde Ronquillo, ó plata en Portugal
paredes, y una mesa derribada en el ó en Castilla, y en poder de quién
suelo junto al brasero, y la alfombra están?
revuelta por el alcaide: Que era cuanto En ninguna parte tengo, dineros
podia manifestar, y que tenia la edad ningunos ni plata, salvo si el alcaide
de veinte y cinco años. de Fermoselle, que se llama Juan Fer
Las ocho de la mañana serian cuan moselle, ha recogido algo de lo del Fres
do se tomó esta declaracion. no de Sayago, ó de las rentas de Fer
Dejó el alcalde retirarse al barbero, moselle y sus tierras, pudiendo subir
y en seguida bajó con el obispo a otro lo del Fresno á trescientos mil duca
cubo inmediato, en donde estaban to dos, y lo de Fermoselle hasta quinien
dos los instrumentos necesarios para el tos ó seiscientos mil, y á mas lo que
tormento. Iba el alcalde acompañado tenia dentro de la fortaleza de Fermo
de Bartolomé Zaratan, verdugo de Va selle, de artillería, municiones y pro
lladolid, y dijo al obispo que á cues— visiones de las que se le entregaron
tion de tormento iba á ponerle, segun cuando tomó la dicha fortaleza.
lo tenia mandado S. M., requiriéndole ¿Qué personas, preguntó el alcalde,
para que declarase qué personas, fue ademas de las que tiene confesadas,
ron sabedoras y participantes de la contribuian para su libertad y arreglo
muerte del alcaide y él se soltase y li de sus negocios?
bertase; quién le habia ayudado en Contestó que los Osorios, sus pa
aquellos tratos, y conciertos, y dónde rientes, especialmente Lope Osorio,
tenia concertado el irse á amparar des señor de Regueros, y Francisco Osorio,
pues de haber salido de la fortaleza pa señor de Agoncillo, el alcalde de Astor
ra estar resguardado; y que lo dijese, ga, señor de la Tablada, hijo de doña
DON ANTONIO DE ACUÑA. - 81

María Osorio Pacheco, señora de Cer— tiró el verdugo de la cuerda y volvió


rada, el duque de Bejar, el obispo de á alzarle del suelo.
Sigüenza y el marqués de Villena, le Desgarradores fueron los ayes y gri
ayudaban, aunque no con cantidades tos del pobre obispo, á quien por temor
determinadas. de que se desmayase hizo bajar el al
Mandó entonces el alcalde que le calde, volviendo á preguntarle con
atasen á las manos que ya tenia suje quién tenia concertado su huida y la
tas, una maroma colgada de una gar— muerte del alcaide. Rogó entonces el
rucha que habia en el techo, y dis obispo que le desatasen que diria la
puso que tirando de la maroma, lo su verdad. -

biesen en alto. Apenas faltó el apoyo Entonces el alcalde Ronquillo le


del suelo al sexagenario obispo, sintió hizo dar una silla para que se sentase
éste con el peso que colgaba de sus en ella, porque era imposible que el
pies descoyuntarse sus miembros, y prelado pudiese sostenerse en pie.
empezó á gritar que no tirasen, que él Despues de esto dijo que Esteban,
declararia. Bartolomé Ortega, clérigo, y Juana,
Bajáronle entonces, y preguntado esclava, eran con los que tenia con
por el alcalde, al verse en el suelo, fianza para tratar sobre su libertad.
volvió a insistir en que lo que habia Preguntado qué concierto tenia he
dicho era la verdad, y que con verdad cho sobre la muerte del alcaide,
no podia decir que nadie le hubiese Contestó, que nunca pensó matar
ayudado en lo que le preguntaba el al al alcaide ni tuvo pensamiento de ello.
calde. Preguntado que causas entonces
Insistió Ronquillo en preguntarle tuvo, ó que injurias le hizo ó que le—
cómo habia concertado su libertad, y siones para provocarle á matarle,
con quién habia fraguado la muerte del Contestó, que jamás tuvo pensa
alcaide. miento de matarle; pero que el alcai
Contestó que repetia lo que dicho de le dijo muchas injurias que le pro—
tiene. vocaron la ira al hablar de los bene—
Preguntado quien le dió los clavos ficios que de él pretendia. Que se le—
del palo y cuchillos, y aparatos con que vantó para acometerle y despues le
lo hizo, -
dió la palabra de no causarle por aque
Contestó que los clavos del palo llo enojo, y luego se desdecia, hasta
los tenia ya hacia muchos dias y que que despues se lo prometió cuando le
se los habia dado el hijo del alcaide tuvo forzado y rendido, y le pareció
Alonso Noguerol ¿ cosas que nece que no le sujetó mas que de una
sitaba, y los cuchillos eran del servi mano.
cio de su mesa. Preguntado si habia alguna persona
Insistió Ronquillo preguntándole mas que él cuando esto sucedió,
que declarase la manera como habia Contestó: que no.
cometido la muerte, y cómo pensaba Preguntado quién le dió tantos cu—
libertarse y le requeria á ello para que chillos como él tuvo entonces, -

lo dijese, teniendo entendido que si Contestó, que los tenia, dos de la


en el tormento moria ó en él se le mesa, y el otro era de la escribanía.
quebrase algun miembro, seria culpa Preguntado quién le dió el trapo ó
suya por no decir la verdad. E inme trapos para atar los cabos de los cu
diatamente haciendo una señal al ver— chillos, - =

dugo, le mandó tirar de la cuerda, y Respondió que estaban allí dichos


estándole tirando, antes de que le al trapos.
zasen del suelo, lleno de terror, pidió Interrogado si cuando cubrió con la
el obispo que no le subiesen aseguran alfombra y echó la mesa y el brasero
do diria la verdad. Alojaron la cuerda. sobre el alcaide que estaba tendido en
Entonces dijo el obispo que no te el suelo, creia que estaba muerto,
nia trato alguno con ninguna persona Dijo que pensaba que estaba tan
para dar muerte al alcaide ni para su vivo como él lo estaba ahora.
libertad. Preguntado con cual de los cuchi
A una señal del alcalde Ronquillo, llos le dió,
TUIO I, -
M4
82 CAUSAS CELEBRES.
-
=

Respondió que no sabe con cual de de en la cabeza con la piedra que te


ellos, que fué con uno de los que ha— nia en el saco,
bia en la mesa, y que alli dejó, aun Respondió, que no sabe si le dió
cuando no recuerda bien si lo dejó con ella ó con el brasero el golpe, ó si
alli ó dónde. se le dió cuando cayó al suelo.
Habiéndole preguntado si las heri Entonces el alcalde Ronquillo le
das que hizo al alcaide se las habia he hizo desatar las manos que tenia ata
cho antes ó despues que le atase, das á la espalda, y le dijo:
Contestó que no se las hizo antes Ahora que teneis desatadas las ma
de atarle. nos decidme que personas fueron las
Preguntado dónde tenia determina que os aconsejaron ó ayudaron á vues
do el irse á poner á salvo, tra fuga.
Contestó que á ninguna parte. Contestó que no tenia nada mas
Preguntado por qué llamaba á Leo que decir que lo dicho.
nardo Noguerol, hijo del alcaide, des— Preguntado quién le habia mordido
pues de lo que habia pasado con el pa el dedo,
dre, segun él ha contado, Res ondió que no creia era morde
Respondió que para asegurarle co dura, sino que se lo hizo cuando an
mo á su padre, prometiendo darle su daba en la refriega con el alcaide y
hacienda segun tenian tratado. no sabe mas.
Preguntado si habia dicho á la mu Preguntado si el zamarro que lle
ger del alcaide que la daria bastante vaba vestido entonces es el que tenia
hacienda, cuando tuvo la refriega con el alcaide,
Dijo, que al tiempo de marcharse Contestó que era otro zamarro mas
de su aposento, le dijo: No me mateis, nuevo, y que cuando andaba bregan
y la respondió: Callad, que antes os do con el alcaide se le habia caido al
daré de comer á vos y á vuestros hijos, suelo. Esto era cuanto tenia que
Interrogado por qué antes de lla decir. -
mar al hijo del alcaide habia muerto á Y lo firmó con el nombre de Za
su padre, morensis. -

Contestó que no creyó que lo deja No se atrevió entonces á renovar


ba muerto, sino caido y tendido en el la protesta con que concluia siempre
suelo, habiéndole arrimado la mesa, sus declaraciones: sin duda el miedo
el brasero, la alfombra y unos li de volverse á ver puesto en el tor
bros, y
mento le hizo abstenerse de esta for—
Preguntado cómo era que tenia cu malidad, á que tanta importancia da
bierta de ceniza la cara el alcaide, ba en vano el obispo. Redújose, pues,
Contestó que despues que le der á suplicar que no pudiéndosele pro
ribó en el suelo, habia cogido el bra bar nada se abstuviese el alcalde de
sero y arrojádolo encima con desór hacer nuevas prsguntas, insistiendo
den, y entonces le pudo haber caido en sus súplicas de que le diesen letra
la ceniza en la cara. do y procurador, como requeria el de
Preguntado qué promesas habia TeCIn0.
hecho á Esteban, á Bartolomé Ortega y Exánime, descoyuntados sus miem
á la esclava Juana si llegaba á verse bros como era natural habiendo sus
en libertad, pendido de sus pies un peso tan enor
Respondió que promesas genera— me y en una edad avanzada, tuvo que
les, de que les haria bien. meterse en la cama despues de esta
Preguntado si habia recibido alguna diligencia; pero á las cuatro de la tar
órden, ó carta de alguna persona, ó de, cuando se hallaba reposado dolo
escritura para ponerse en libertad, y rido de las grandes incomodidades del
que quien se lo habia aconsejado, tormento, se presentó nuevamente
Contestó que ninguna persona le con su escribano el alcalde Ronquillo,
habia escrito; antes bien habia servi le mandó vestir y le requirió para que
do á muchos grandes del reino y nin dijese y declarase de nuevo acerca del
guno habia hecho nada por él. trato y concierto que habia tenido con
Preguntado si habia dado al alcai Bartolomé Ortega, clérigo, con el cria
-
lJON ANTONIO DE ACUÑA. 83

do Esteban y la esclava Juana para la hecho otros muchos insultos en el


muerte del alcaide y libertarse. Amos tiempo de las alteraciones y Comuni
tazado ya el obispo, le contestó, al ver dades de estos Reynos y siendo prin
aquella incomodidad inútil que le cipal persona en ellos, y como desde
causaban, que so cargo de las órdenes aver sido preso por ello y puesto en la
sagradas que habia recibido, el diablo fortaleza desta villa de Simancas don
le llevase en cuerpo y alma si habia de agora está por mandado de S. M.
pasado otra cosa mas que lo que tenia ha sido muy bien tratado y con mu
dicho y que en ello se ratificaba. cha libertad de su persona, y como
Volvió el alcalde á preguntarle si agora últimamente seyendo ingrato á
cuando iba á arrojarse por las almenas las mercedes y buen tratamiento que
se habia llegado á él Esteban, el cria S. M. le havia hecho y mandado ha
do del alcaide, con un lanzon, y con cer en dicha fortaleza, habia muerto á
testó que al salir por la parte de la Mendo de Noguerol, Alcayde della
barrera vió alli á Esteban sin lanzon muy cruelmente por maneras nuevas
ni otra arma, y con él á Francisquillo, y nunca pensadas, que cumpliendo y
negro del dicho alcaide, y que el Fran executando lo que S. M. le mandó
cisquillo le dijo si queria una soga pa hacer del dicho obispo: le manda dar
ra echarse por las almenas y le res un garrote apretado al pescuezo arri
pondió que sí, que se la trajese, y que mado á una de las almenas por donde
Francisquillo se marchó con pretesto se quiso huir de manera que muera
de ir á buscar la soga y cºn él Este de muerte natural, y mandó notificar
ban, no habiéndoles vuelto á ver mas. lo y á los Alguaciles que lo executen:
Que luego entró gente por todas par —El licenciado Ronquillo.
tes en la fortaleza y le cogieron y lle PRoNUNCIAMIENTo. Dada, rezada é
varon al cubo. pronunciada fué esta sentencia por el
Hizo firmar el alcalde esta nueva dicho Señor Alcalde Ronquillo en la
diligencia al obispo y le dejó descansar villa de Simancas, en la posada del di
aquella tarde y noche, que de cho Señor Alcalde este dicho dia, mes
bia ser la última de su agitada vida. y año en susodicho 23 dias del dicho
El alcalde Ronquillo se retiró á su mes de marzo de 1526., Testigos que
casa y en ella escribió , firmó la sen alli fueron presentes Pedro de Esqui
tencia de muerte del obispo, senten nas y Juan de Soto, Alguaciles de la
cia que se conoce que venia prepara Córte de S. M. y Bautista Cobarruvias,
da ya desde donde habia sido enviado Hernando de Herrezuela y Juan Cas—
á Simancas. s
tro Nuño—Gerónimo Atienza.
El tenor de esta sentencia fué el
siguiente: Al dia siguiente muy de mañana,
23 de marzo, cuando todavía estaba
En la villa de Simancas á 23 dias descansando el obispo, que apenas ha
del mes de marzo del dicho año bia podido dormir en toda la noche
de 1526 años, el dicho señor alcalde con los atroces dolores que le habia
dixo que visto como despues de aver ocasionado el tormento, se presentó
hecho el dicho Obispo don Antonio de el escribano Gerónimo de Atienza,
Acuña muchos escándalos y bullicios acompañado de los alguaciles y de
en estos Reynos estando el Empera otras muchas gentes, y de los testigos
dor y el Rey Nuestro Señor ausente Bautista de Cobarrubias, vecino de
dellos, haciéndose Capitan general y Valdeastilla, de Hernando Herrezuela,
haviendo juntado exércitos ¿ mucha á quien se habia encargado de la al
gente á pie y de á cavallo y artillería, caldía por la muerte del alcaide, y de
y haver entrado lugares y ciudades Juan Castro Nuño, criado del alcalde
de la Corona Real quitando las justi Ronquillo, y le notificó la sentencia
cias de S.M. y poniendo otras por la que habia pronunciado en la noche
Comunidad, combatiendo castillos y anterior el alcalde. No debió sorpren
fortalezas, peleando contra los Gover der á don Antonio Acuña aquella sen
nadores y Capitanes y exércitos y pen tencia, impuesta con tanta rapidez, y
dones reales y saqueando lugares y sin haber oido su defensa, porque le
84 CAUSAS CELEBRES. - -

vantando sus ojos al cielo en el mo— y su juez de comision sobre la muerte


mento en que acababan de leérsela, de Mendo Noguerol, alcaide de la forta
esclamó: letulus sunt in his que dicta leza de la villa de Simancas, y soltura
sunt mihi: in domum domini bimus. de don Antonio Acuña, obispo de Za
Aquel anciano avezado desde muy mora, y la culpa que sobre ello tiene
jóven á los peligros, y á mirar la el dicho obispo, hago saber á vos, Juan
muerte sin espanto en los campos de Cuellar é Gerónimo de Atienza, escri
batalla la vió llegar ahora sin tem banos de Sus magestades, que el dicho
blar, tal vez la consideró como el tér obispo de Zamora ha de hacer hoy di
mino de una cautividad sin fin, y á cho dia ante mí y en mi presencia, re
pesar de lo quebrantado que se halla nunciacion del obispado de Zamora, y
ba por los dolores del tormento que de otros beneficios y préstamos que
habia sufrido, no mostró la menor de tiene de nuestro muy Santo Padre para
bilidad ni laqueza. que se provean en las personas que el
Preguntó que cuando habia de ser emperador nuestro señor pidiere y su
la ejecucion de la sentencia, y el es plicare: y porque el dicho obispo lo
cribano le notificó que seria en aquella quiere ansi pedir y otorgar y porque
misma mañana. Tanta era la prisa que cumple al servicio de S. M. que lo su
el alcalde Bonquillo tenia por con sodicho sea secreto, y no sean avisadas
cluir con su antiguo enemigo. otras personas de ello, y la escritura
No tenia tiempo que perder el que sobre ello se hiciere ante vos los
obispo para arreglar sus asuntos es dichos escribanos ha de ser jurada y
pirituales y temporales. w con juramento, y que si por ventura
El alcaldeltonquillo, sin duda para pusiéredes escusa é dilacion que los
atenuar el atropello que iba á come escribanos de Sus magestades no pue
ter, quiso que a la ejecucion del obis dan otorgar escritura con juramento,
po precediese una renuncia de éste porque asi lo mandan sus títulos so
de su obispado, redactada en los tér— ciertas penas; por ende, visto lo suso
minos mas humillantes. Mandó á los dicho, y como por vosotros ine fué y
escribanos Juan de Cuellar y Geróni pedido que no podíades hacer dicha
mo de Atienza que estendiesen la re escritura con el dicho juramento, por
nuncia del obispado de Zamora en es— que os temíades de ser punidos por
critura jurada y sin testigos por con ello y castigados; y por ende yo os man
venir asi al servicio del rey y que fue do en nombre de S. M. y porque ansi
se Secrclumente. -

cumple á su servicio, y mirando los de


Resistieron estos escribanos la es— litos que el dicho obispo habia cometi
tension de semejante documento en do, que luego pase, y se otorgue ante vos
aquella forma clandestina, por ser no otros la escritura, sin embargo que por
toriamente contrario á lo que previe vuestros titulos que no lo p0deis hacer,
nen todas los leyes del reino y proli por cuanto cumple ansi á la negocia
bírselo sus titulos espresamente. cion en que entiendo por mandado de
Ronquillo tenia plenos poderes del S. M.; y por este mi mandamiento
rey, y la seguridad de que habia de mando y de parte de S. M. requiero,
aprobarse cuanto hiciese; ademas ha que ningun juez ni justicia pueda pro
bia faltado en el proceso á todas las ceder contra vosotros por ello, pues lo
leyes y poco le importaba una ilegali hicisteis por mi mandato siendo compe—
dad mas ó menos. lidos para ello: lo cual haced y cum
Para vencer el justo reparo de los plid, so pena de privacion de vuestros
escribanos espidió el alcalde Ronqui oficios y destierro del reino por tres
llo la siguiente cédula que trascribi años, y diez mil maravedises para la
mos integra como un documento que cámara y fisco de S. M. á cada uno, y
da mas que ningun otro á conocer so la dicha pena á las dichas justicias
como se juzgó y sentenció esta céle y otras personas que no se entrometan
bre causa. en lo susodicho. Fecho en la villa de
Simancas á veinte y tres del mes de
El licenciado Ronquillo, alcalde del marzo de mil quinientos y veinte y seis
Consejo de S. M. y de su casa y córte, años. Testigos que vieron mandar lo
DON ANTONIO DE ACUSA.

susodicho al dicho señor alcalde: Pedro nitencia de sus culpas y pecados; que
de Esquinas y Juan Fanega; y Juan de él por la presente renunciaba é hacia é
Soto, alguaciles de la casa y córte de hizo renunciacion de su libre y espon
Su magestad.—El licenciado Ronqui tánea voluntad del dicho Obispado de
llo.—Por mandado del señor alcalde Zamora y de todos los otros Beneficios
Juan de Cuellar, escribano. y préstamos que tiene con todo lo á
ello anexo y perteneciente en mamíos
El Pedro Esquinas y Juan Fanega de nuestro muy sancto, Padre para que
que aparecen aqui como testigos, eran su Sanctidad provea dello é dé cada
los alguaciles áque
do Ronquillo consigo habia lleva cosa é parte dello á la persona é per
Simancas. v,
sonas que la magestad del Emperador
Entonces los dos escribanos redac Rey nuestro Señor pidiese é suplicase,
taron el documento de renuncia de é si necesario era dixo, que dava y dió
don Antonio Acuña del obispado de Za por ningunas otras qualesquier renun
mora, documento que evidentemente ciaciones, cesiones, traspasaciones,
fué supuesto, pues que solo intervinie contrataciones que del dicho Obispado
ron en él los agentes mas inmediatos Veneficios y préstamos tenga hechas en
de Ronquillo, y que está en contra qualesquier manera hasta el dia de la
diccion con el carácter de Acuña, el fecha de esta.—E suplica á S. M. lo
que desde que llegó Ronquillo hemos que quiera ansi aceptar y haver por
visto que mudó de tono en sus decla bien y si necesario era para mayor si
raciones, lo negó todo, contestaba con guridad y firmeza de lo susodicho dixo
desden, y solo el dolor del tormento le que jurava y juró por las órdenes sa
hacia responder mas mesurado. ¿Cómo gradas que recivió poniendo la mano
habia de firmar el obispo, cuando ya sobre la corona y el pecho, que estará y
tenia notificada su sentencia de muer— pasará por esta dicha renunciacion, y
te, cuando tenia la certidumbre de su que agora ni en ningun tiempo él ni
ejecucion dentro de pocas horas, la re- otra persona por él no irá ni vendrá
nuncia de su elevado cargo? La lectura contra lo en ella contenido ni pedirá
de este documento convencerá ademas relaxacion del dicho juramento por sí
del modo con que se hizo, de su fal- ni por otro y en caso que le fuere con
sedad. cedida á su pedimento ó motu propio
que no usará dello é de como lo dixo é
En la villa de Simancas, dentro de dice lo pidió por testimonio á nos los
la fortaleza della, á 23 dias del mes de presentes Escrivanos y lo firmó de su
marzo de 1526 años echado en la ca- nombre: testigos que fueron presentes
ma D. Antonio de Acuña, Obispo de á lo que dicho es é se lo vieron otorgar
Zamora, dixo en presencia de nos los é firmar aqui de su nombre Pedro de
Escrivanos, que por quanto estando Esquinas é Juan Fanegas é Juan de
ausente el Emperador y Rey Nuestro Soto, Alguaciles.—A. Zamorensis: ante
Señor destos sus Reynos, é havia fecho mí Gerónimo de Atienza, Juan de Cue
ocasionadamente algunas cosas en su llar, Escrivanos. -

deservicio y daño de pueblos y perso—


nas particulares, y despues y agora úl A la notificacion de la sentencia de
timamente estando en la dicha fortale muerte habian asistido varios testigos;
za mejor tratado en ella por mandado Bautista Cobarrubias vecino de Val
de S. M. de lo que sus culpas merecian, destillas, y Hernando Herrezuela, al
avia dado ocasion á la muerte de Men caide que era del castillo ahora, y
do de Noguerol, Alcayde de la dicha Juan de Castro Nuño, criado del al
fortaleza, que le tenia preso é le havia calde Ronquillo y los alguaciles y otra
muerto por algunas causas aunque no mucha gente.
bastantes para tan mal caso é él desea Retiráronse despues todos, y per
va épedia ser puesto en algun lugar maneciendo cortísimo rato el escriba
estrecho é otra clausura demudándose no Atienza solo se figuró el otorga
y despojándose de todo lo que tiene es miento de la renuncia.
piritual y temporal donde pudiere y El poco tiempo de que podia dis
pueda hacer estrecha y perpetua pe poner Acuña, le empleó en otorgar su
86 CAUSAS CELEBRES.

testamento ante el escribano Juan de del desgraciado alcaide Noguerol doce


Cuellar, y los testigos Bautista de Co mil maravedís de renta en cada año
barrubias, Gerónimo Brit y Diego de á cada uno de los herederos, encar—
Medina, y lo hizo con tanta firmeza y
gando que á los que fueren de mayor
¿ edad se les hiciese la entrega lo mas
que nada olvidó, y atendió
hasta sus menores obligaciones. - pronto posible, y que lo correspon
Dispuso que le enterrasen en la diente á los menores se pusiese á ré
iglesia de San Ildefonso de Zamora, de ditos y á ganancias, señalando para su
jando la eleccion del sitio á sus testa pago el término redondo que tenia en
mentarios. la ciudad de Burgos llamado Quinta
Estableció en la misma iglesia una nar de los Cojos que le habia compra
memoria de sesenta mil maravedís do, y si esto no bastase varias casas
de sus bienes para que todos los dias que tenia en el arrabal de la Vega en
se celebrase una misa de requiem por Burgos; esperando que las hijas del
su alma, y la del honrado alcaide Men alcaide Noguerol que se hallaban sien
do Noguerol, y los miércoles, viernes do monjas no recibiesen nada.
y sábados de cada semana una misa Legó á Diego de Osorio, su herma
cantada. no y vecino de la ciudad de Burgos, y
A la catedral de Zamora la legó á doña Isabel su muger, cien mil ma
una renta de cien mil maravedís so ravedís de renta al año para cumpli
bre sus haciendas de Villamor de los miento de promesas que anteriormen
Escuderos y Cibanal. te les tenia hechas.
A la iglesia colegial de Toro la legó A Cárlos Osorio y á Diego Torres,
cincuenta mil maravedises de renta sus parientes y criados, les mandó
sobre sus bienes de Villa-lazar y del doscientos ducados de oro.
Fresno de la Ribera, estableciendo Legó tambien otras varias cantida
tres misas semanales por su alma y la des á varios criados y amigos suyos,
de Mendo Noguerol. y nombró por testamentarios al licen
Mandó dar trescientos ducados de ciado Gonzalo del Monte, canónigo de la
oro á los herederos del obispo de Ca iglesia de Zamora, al canónigo Balba
lahorra, é igualmente otros seiscien y á Diego de Torres su pariente, veci
tos á los hijos del doctor Tello, que no de Valladolid, á los cuales y á cada
fué del Consejo de las Ordenes. uno in solidum dió poder sobre todos
Mandó que se reparasen los daños sus bienes para que con ellos cumplan
que habian hecho sus tropas en algu y ejecuten su última voluntad.
nos lugares en la provincia de Toledo , Llevó adelante en aquel terrible
y tierra de Campos, señalando pa trance el obispo su espíritu de equi
ra esto cuarenta mil maravedís, aun dad, estableciendo que, por cuanto
cuando él jamás habia tomado nada una muger, viuda de Pedro Salcedo,
para sí en las espediciones, antes al vecino de Valladolid, habia acudido
contrario habia procurado evitar los tiempo antes á Simancas á decirle que
daños y rapiñas que hacian sus tropas. le debia seiscientas picas, que asegu
Señaló tambien cien mil marave raba le habia tomado en tiempo de
dís para indemnizar los daños que las revueltas de las comunidades de
sus tropas en tiempo de las comuni Castilla, hecho de que él no tenia la
dades habian tambien causado en el menor memoria, en descargo de su
Cerro del Aguila y en el lugar de Vi conciencia rogaba á sus testamenta
llarluengo. rios pagasen sin demora el valor de
Legó doce mil maravedís de ren las espresadas picas, asi como cual
ta al año á la iglesia de San Ati quiera otra cosa y cargo que averi
lano, estramuros de la ciudad de Za guasen deber. y
mora, sobre sus bienes de la Moraleja Remitia el cumplimiento de esta
y del Fresno de Sayago, estableciendo su última voluntad á la piedad y con
que dijesen todas las semanas en los sideracion del rey, para que no acor
viernes una misa rezada por su alma y dándose de sus culpas pasadas y si de
por la del alcaide Mendo Noguerol. su buena voluntad que siempre le ha
Legó á la muger, hijos y herederos bian tenido su progenitores, mandase
l)0N ANTONIO DE ACUÑA. 87

y permitiese que de sus bienes que tero ó alfombra, y una soga atada á la
estaban confiscados se cumpliesen las almena. -

mandas y disposiciones que contenia El alcalde Ronquillo, con horrible


este testamento, aunque no fuese mas serenidad, presidia aquella fúnebre co
que por via de limosna. mitiva: gozábase en su obra, y creia
Terminado el testamento, todavía con su cruel orgullo haber hecho mas
añadió un codicilo por el cual manda en cuatro dias, que en un mes los al
ba á la iglesia de San Salvador de Si caldes de córte de la chancillería de
mancas y á los beneficiados de ella, Valladolid.
doce mil maravedís de renta en cada Estos querian juzgar al criminal,
un año, para que sobre su cuerpo que estos observaban las fórmulas protec
habia de quedar en la iglesia enterra toras del derecho; Ronquillo habia ve
do, el bachiller Francisco Perez vica nido á matar al obispo, á atropellar y
rio de la villa, y Francisco del Riaño, conculcar todas las leyes del procedi
camarero que fué suyo, á quienes aña miento. Bartolomé Zaratán, el verdugo
dia y nombraba testamentarios con de Valladolid, reasumia toda la fórmu
los otros tres ya espresados, dispusie la del proceso; por eso Ronquillo se
sen que los doce mil maravedís se re habia presentado con él desde el pri
artiesen, la cuarta parte por distri mer dia en Simancas. -

ucion cuotidiana entre los beneficia Bajaba lenta y solemne la fúnebre


dos que debian decir una misa de re procesion, entonando en lúgubre son
úiem todos los viernes por su alma, el patético salmo 50 del rey profeta.
as de sus bienhechores y las del Miserere mei, Domine, secundum
Mendo Noguerol, y las otras tres cuar— magnam misericordiam tuam, decia el
tas partes de los doce mil maravedís obispo en tono firme, y cual si fuese
fuesen para la fábrica de la iglesia; oficiando en una de las procesiones de
rogando al rey que por la reverencia su catedral de Zamora.
á Dios mandase y vigilase el cumpli El secundun multitudidem misera
miento de estas mandas y las otras, tionum tuarum.... respondia llorando
y que los dos testamentarios añadidos en coro el clero, y continuaban asi al
en el codicilo entendiesen todos los ternativamente los espresivos versícu
asuntos del testamento lo mismo que los de este salmo de dolor y de peni
todos los demas. tel) Cla.

Firmó despues con mano tranquila La turbacion y angustia mas de una


y segura este último documento. vez hacia equivocarse á los clérigos, y
Arreglados sus asuntos temporales, entonces el obispo les advertia su equi
¿ una taza de caldo el obispo, con vocacion, y continuaba con voz entera
erenció como cosa de media hora con entonando el patético salmo.
un eclesiástico, y como á cosa de las Llegado á la plaza del castillo, don
doce de la mañana se levantó de la ca de debia ejecutarse la fatal sentencia,
ma, vistióse ayudado de su confesor, y postróse el obispo sobre la alfombra,
salió del cubo para el lugar de su su— hizo un momento de fervorosa oracion
plicio, contrito, resignado y sin el me á Dios, y dirigiendo primero su vista á
nor síntoma de debilidad, á pesar de lo don Rodrigo Ronquillo, la apartó luego
quebrantado que se hallaba por el tor— con desden para fijarla sobre el verdu
IIlen t0. go Bartolomé Zaratán, el que sin duda
Pintábase en su rostro la humildad debió de causarle menor repugnancia.
cristiana, y con paso tardo, salió de — Yo te perdomo, le dijo, y procura
aquella prision donde habia estado cer que en comenzando aprieles muy recio.
ca de seis años, y á la que no debia Colocóse sobre la alfombra pegada
volver mas. al muro; el verdugo le colocó el dogal
Aguardábanle á la puerta todos los á la garganta, le dió con él garrote,
clérigos que habia en Simancas, y for dejando caer su cuerpo sobre la alfom
mados en procesion se dirigieron al bra, donde permaneció toda la tarde,
patio frente á la almena por donde se hasta que al anochecer, colocado en un
habia querido salir. Alli habia tendido sencillo ataud, fué conducido á la igle
en el suelo pegado al muro un repos sia, y abrieron una fosa, donde le en
88 CAUSAs, CELEBRES.

terraron junto al altar donde entonces ra, no lo dijo antes, ni en el tormento,


- se decia la misa al puebló por estar re aunque fué con mas de dos quintales y
construyéndose la iglesia. Aunque mu medio de hierro á los pies, y siempre
chos caballeros parientes suyos quisie negó el tener conciertos con estos de
ron llevarle á sepultar a otro lugar mas la fortaleza, ni con persona de fuera
honroso, y sus testamentarios pidieron para matar al alcaide; ni para se ir,
permiso para trasladarlo á Zamora en mas de que tenia confianza en este
cumplimiento de su última voluntad, Bartolomé, clérigo, y en el Esteban,
jamás pudieron conseguirlo. que huyó, y en la Juana, esclava, que
- En la misma tarde en que se habia le favorecian si él se saliese para ayu
verificado la muerte del obispo Acuña, darle á salvar, y por ello haberles ofre
que presenció el alcalde Ronquillo, es cido y hecho promesas señaladas. Y
cribió éste á don Francisco de los Co envio á Vm. las informaciones que de
bos, secretario del emperador Cár— allá traje con algunos mas testigos, que
los V, avisandole de haber ejecutado despues se reunieron por el alcalde
cuanto se le habia prevenido. Esta car Zárate los reconocimientos fechos
ta, que íntegra trascribimos, pinta grá por el obispo de las cartas que le fue
ficamente el carácter de Ronquillo, y ron mostradas y confesiones del obispo,
revela muy á las claras que para pro en especial la última que hizo, porque
ceder como procedió tenia plenos po— S. M. pueda pedir la absolucion, asi de
deres é instrucciones del monarca. lo que S. M. mandó hacer en lo del
obispo, que es atormentarle y matarle,
Juy magnifico señor: como del atormentar á este otro Barto
lomé Ortega, clérigo, asi para S, M.,
Yo he cumplido el mandato de como para los que por su mandado lo
S. M., cuanto á lo del obispo, y él ha hemos hecho y ejecutado, y conviene
pasado desta presente vida, dándole que venga tambien asimismo para los
un garrote colgado de una almena; no alcaldes y alguaciles, asi de la córte
he podido hacer mas que poner el cuer como de esta villa, y otros muchos que
po y el alma al tablero por cumplir el le prendieron cuando se iba, y le die
mandado y servicio de S. M. Digo el ron algunos golpes y pedradas y le di
cuerpo, porque este buen hombre te jeron injurias y le echaron prisiones,
nia hartos deudos, de quienes siempre que venga para todos muy cumplida,
me tengo que recelar para andar la bar porque ya en esta villa á muchas per—
ba sobre el hombro: crea Vm. que ha sonas quitan de las horas y divinos ofi
sido con el mayor trabajo del mundo, cios, y yo no oigo misa, ni aun S. M. la
porque desde la hora en que me vió puede oir sin cargo de conciencia.
temia tanto lo que le habia de su— En lo de este clérigo yo le dí gra
ceder, que se desdijo de todo cuanto vísimo tormento, porque duró dos ho
habia dicho, y respondia cavilaciones ras y mas, subiendo y bajando y es
por círculos y palabras, que ni decia tando con tres quintales de peso y
ni concluia cosa alguna, ni habia que diez libras mas, y no confesó otra co
tomar de sus palabras, sino todo escu— sa mas de lo de las cartas y decir, que
sarse y querer dilatar y todo miedo, si el obispo se saliera que él le tenia
tanto que cada vez que entraba yo, an ofrecido que le favoreceria, dejando
tes que le comenzase á preguntar, pe durmiendo al hijo del alcaide, pero no
dia luego el bacin, que de antes no te para matar al alcaide, ni para cosa de
nia mas temor ni vergüenza de lo he peligro ni afrenta; y creo que dice
cho, y decia que se tenia en mucho verdad, porque asi parece por la car
matar un escudero, mas al fin yo le ta que él respondió al obispo, en la
apreté con tormento de manera, que él cual lo dice asi espresamente y paré
me dijo lo de la muerte del alcaide, y ceme que con éste bastaria echarle
aun no del todo a la clara; pero lo del del reino, y mas que á la sazon que
tratado y concierto con aquestos que pasó lo de la muerte del alcaide y el
están ¿ y con otros, que hubie quererse ir el obispo estuvo siempre
sen sido participantes en la muerte del en la iglesia y no fué á la fortaleza.
alcaide ni en soltarse de aquella mane La esclava tenian los alcaldes en la
DON ANTONIO DE ACUÑA. 80

cárcel de Valladolid y le habian dado ñor el muy magnífico estado, etc. De


un buen tormento, y yo la díacá otro Simancas en 23 de marzo. Besa las
tormento muy mayor, tanto que se manos de Vm.—El licenciado Ron
murió dos veces en el tormento que quillo.
pensé que nunca volveria, y está muy Asimismo han declarado algu
mala y está hecha una perra que nun— nos, que le ayudaban para su compo
ca ha querido decir otra cosa tras de sicion, y de los frutos que han renta
confesar que traia y llevaba aquellas do su obispado y beneficios.
cartas, y que nunca supo, ni entendió Al muy magnífico señor comenda
otra cosa tocante á la muerte del al dor Francisco de los Cobos, secretario
caide, y que ella no creia que escri de S. M. y de su gobierno.
bian sobre la soltura del obispo ni so
bre otra cosa mala; no sé si vivirá: El rey contestó inmediatamente al
si viviere castigarse ha conforme á la alcalde Ronquillo aprobando en todo
culpa que tuviere; contra el Esteban su conducta, y hasta elogiándole, por
procedo en rebeldía, de manera que, haber hecho las cosas como él las solia
sino fuera por esperar la respuesta hacer. -

de S. M. en lo que tengo de hacer con Curiosas por demas son las dos
el clérigo, yo me pudiera ir luego: cartas que le dirigió el rey, y la que
por tanto suplico á Vm. que á la ho le escribió el comendador don Francis
ra se me envie respuesta de S. M. co de los Cobos con quien se entendia
mandá que se haga en todo con cor el alcalde, y que hasta en tono de
reo que venga aprisa porque yo no chanza habla de la absolucion que
esté aqui perdido é impedido; temo tenia que pedirse á Roma por lo eje
lo que han de decir allá todos, en es cutado con el obispo de Zamora.
pecial algunos señores del Consejo
muy escrupulosos, de haber en el EL REY.
campo alguna gente que aguardasen
aquel dia al obispo para le recoger. Y Licenciado Ronquillo Alcalde de
puede creer S. M. que no la hubo, mi Casa y Córte del mi Consejo, ya
porque los alcaldes y villa hicieron en savedes como por la comision que os
aquella cumplida diligencia, que fue mandé dar para entender, en el casti
ron luego á caballo por todo el campo go de la muerte de Mendo Noguerol,
y por todas partes dentro de una le Alcayde de la fortaleza de Simancas y
gua á descubrir y reconocer y no ha de lo que en ella acaesció al tiem
llaron rastro de persona. po que fué muerto os señalé mill qui
Por otras dos cartas escribí á Vm. nientos maravedís para vuestra per
de lo que era menester para la co sona, cada dia de los que por dicha
branza de nuestro salario ; si Vm. comision declaré que os ocupásedes
no es servido que vamos sin él mán en ello, y para dos Alguaciles de mi
deme enviar cédula que hable con el Casa y Corte que con vos fueran dos
factor y arrendadores. cientos maravedís á cada uno, y para
Entre otras cosas que tenia este un escribano por ante quien pasare
buen hombre (que Dios perdone) es lo que en lo susodicho hiciéredes cien
muy buenas haciendas y muchas, asi maravedís cada dia, y os mandé que
en el obispado de Zamora, que ha cobrásedes los dichos salarios de los
comprado, como en tierra de Burgos, vienes de los que en ello halláredes
aunque para esto terná hermanos, y culpados ó sino hubiese vienes de los
tenia sin el obispado, segun él dijo, frutos y rentas del Obispo de Zamora,
mas de diez ¿ beneficios y de segun mas largo en la dicha comision
préstamos, y dígolo para que S. M. se contiene, éporque como quiera que
sobre todo lo que fuere servido y á por ella mandé que don Francisco de
tiempo acuda á Roma para hacer mer Mendoza Obispo de Oviedo, Adminis
cedes á quienes le sirven, á S. M. so trador de dicho Obispado de Zamora,
lamente escribo remitiéndome á la os diese y pagase los maravedís que
carta de Vm. por no le dar pena con en los dichos salarios se montasen
la larga lectura. Prospere Nuestro Se porque no os
TOMO I,
dicultº,
para que no
90 - CAUSAS CELEBRES.

os lo pagando lo pudiéredes cobrar sin hecho en las cosas en que entendeis; Yo


que en ello se pusiese alguna escusa os lo tengo en servicio y ya que eso es
ó dilacion porque no os detengais ¿ fecho en lo que resta que es enviar por
esta causa, por esta mi cédula os doy la absolucion, yo mandaré proveer que
poder y facultad para que en caso que con diligencia se procure y trayga tan
no haya vienes de culpados de que po cumplida como conviene al descargo
dais ser pagado de dicho vuestro sa de mi Real conciencia, y de los que en
lario y los dichos Alguaciles y Escri esto han entendido conforme á lo que
vano que con vos fueron, requiriendo escrivís.—En Sevilla, á 1.º de abril
ó haciendo requerir primeramente á de 1526 años.=Yo EL REY.
los factores ó acreedores ó arrendado
res y á otras qualesquier personas No es menos curiosa la contestacion
que por el dicho obispado de Oviedo del ministro del rey el comendador Co
tienen á cargo los frutos é rentas del bos, escrita con toda la franqueza que
dicho obispado, que os den y pagan daba la intimidad que tenia con el
los maravedis que en los dichos sala calde don Rodrigo Ronquillo, carta
rios se montaren, lo qual yo por la que disipa cualquier duda que pudiese
resente les mando que hagan sino lo quedarnos de que la causa del obispo
icieron y si en ello escusa y dilacion Acuña salió ya juzgada de la córte, y
pusieren los podais cobrar y cobreis de que Ronquillo fué enviado por el
de lo mejor parado de los frutos y rey, no á procesar á don Antonio de
rentas del dicho obispado y de otro Acuña, sino á darle garrote pronto y
qualesquier vienes del dicho Obispo de cualquier modo. - -

de Zamora don Antonio de Acuña,


con todas las costas y gastos que por Recibí la carta de Vmd. con la in
su culpa se os recrecieren en la dila formacion é con la sentencia que envió,
cion de la paga y cobranza dellos, y y S. M. vió la suya y la mia, y le ha
para que podas hacer dello todas y parecido muy bien lo que Vmd. ha he
qualesquier ventas y remates de vie cho, aunque algunos escrupulosos les
mes y otras qualesquier cosas que fue parezca otra cosa, pero S.M. está muy
ron menester hasta que seais pagado contento de lo hecho, como verá por
de los dichos salarios ansi de los di su respuesta; á Roma se escrivirá y
chos quarenta dias que llevasteis procurará con diligencia por la absolu
¿da que os ocupásedes en lo su cion; en lo del Clérigo Vmd. lo remita
sodicho como de los que mas á culpa l entregue á su juez como Su magestad
de los susodichos por no os los pagar o manda: para cobrar su salario se le
os ocupásedes y de las costas y gastos envia la cédula que pide; en lo que to
que para esta causa hiciéredes, que ca á sus hijos yo aré (quando sea tiem
por esta mi cédula os doy poder cum po y haya buena coyuntura) el oficio
plido para todo ello con sus inciden que devo. Guárdeme Nuestro Señor á
cias y dependencias, anexidades y su muy noble persona é casa como lo
hago saños y de paz á quien los com desea, de Sevilla, 28 de marzo.=Si
prase los vienes que por esta razon Vmd. pudiere aver su salario de los
fueron vendidos é rematados: fecha bienes del obispo, el Sr. D. Francisco
en la Ciudad de Sevilla á 28 de marzo recibirá merced. Véngase Vmd. luego:
de 1526 años.—Yo el Rey.—Por man que buenos estamos esta Semana Santa
dado de S. M.—Francisco de los Cobos. que S. M. y yo no oyremos Misa ni otros
oficios divinos, á lo que Vmd. mandare.
EL REY. Francisco de los Cobos.—El sobrescri
to decia: A mi Señor el Alcayde Ron
Licenciado Ronquillo, alcalde de mi uillo, Alcalde de la Córte de S. M. y
Casa y Córte é del mi Consejo, ví vues e su Consejo. -

tra letra de 23 del presente, y la que


escrivísteis al secretario Cobos, é por El alcalde Ronquillo no se mostraba
ellas é visto lo que aveis fecho en lo menos codicioso en cobrar sus conside
que llevásteis mandado, que ha sido rables dietas, cuanto arbitrario y cruel
como vos lo soleis hacer y aveis siempre se habia mostrado en los procedimien
DON ANTONIO DE ACUÑA. 91

tos judiciales. Hizo que la misma tar Ronquillo en vista de lo que en autos
de de la ejecucion del obispo se le pre resultaba , contra la esclava Juana, y
sentasen por Leonardo Noguerol y do en pena de la culpa que le suponia,
ña Constanza de Espinosa, muger é hi mandó que sacándola caballera encima
jo del alcaide cuantos bienes de la de un asno con una soga de esparto al
pertenencia del obispo paraban en su pescuezo, y otra atada á los pies por
poder, y fueron los siguientes: abajo, fuese llevada por las calles pú
Veinte y nueve libros pequeños y blicas de Simancas, y con voz de pre
grandes en latin y dos pares de oras, onero, diciendo la causa de su delito
que las unas eran ricas.—Un breviario. e fuesen dados cien azotes, y cortada
—Un San Juan y un San Miguel de pin la lengua por las mensagerías y cartas
cel, y que estas dos- pinturas las ha que llevó al obispo sin descubrirlo á
vian llevado de la cámara del dicho su señor el alcaide. -

obispo el dia que mató al dicho alcay Pronunciada que fué esta senten
de.—Una cama de campo con cuatro cia, se notificó en el acto á la esclava
cortinas y cielo de sarga verde.—Tres Juana, que no dijo cosa alguna, ni ¿qué
colchones y una frazada.—Dos colchas. podia decir quebrantada y moribunda
—Dos antepuertas viejas.—Un repos casi con el tormento sufrido pocas ho
tero viejo y dos almohadas.—Cuatro ras antes?
sábanas de ruan.—Dos almohadas blan Simancas que tres dias antes habia
cas vacías.—Otras dos labradas de ne presenciado aterrada el garrote , del
gro.—Tres roquetes de Olanda.—Tres obispo, se estremeció al espectáculo de
pañuelos de Olanda.—Quatro mangas ver azotar por sus calles y mutilar á
de roquetes de Olanda.—Tres camisas una infeliz muger por un delito tan li
de Olanda.—Un zamarro.—Un sombre gero.
ro viejo.—Cuatro caperuzas de lienzo. Habia lujo de crueldad. Menester
—Un repostero nuevo y otro viejo. era tambien que hubiese el escándalo
Una manta frazada de una alfombri de que el alcalde Ronquillo que no
lla.—Y una docena de pañizuelos de habia reparado en poner el dogal en
IIn63Sa. la garganta de un príncipe de la Igle
La comision principal de Ronquillo sia, aunque culpado, sin contar con la
habia terminado con la justicia ejecu Iglesia para nada violando las leyes
tada en el obispo, pero ni el alcalde ni civiles y canónicas, se mostrase escru
el verdugo podian permanecer ociosos puloso al pronunciar la sentencia de
los dias que aun permaneciesen en Si un simple clérigo: el que fué entrega
IIlan C8S. do al juez eclesiástico competente pa
El dia 26 de marzo, Ronquillo vol ra que fuese juzgado.
vió á preguntar á la esclava Juana so Terminó el alcalde Ronquillo este
bre lo que habia pasado en la muerte célebre proceso fallando en el mismo
del alcaide, haciendo que el verdugo dia 26 de marzo en ausencia y rebel
Bartolomé Zaratan la metiese varias as día la causa por lo resultante contra
tillas de tea en los dedos de la mano Esteban, condenándolo á que fuese
por entre las uñas y la carne, hacién ahorcado donde quiera que pudiese
dole saltar la sangre. ser habido para ejemplo de otros
En vano gritaba la pobre esclava criados.
que el diablo la llevase en cuerpo y El emperador Cárlos V, como habia
alma si sabia otra cosa mas de lo que escrito al alcalde Ronquillo, envió á
tenia anteriormente dicho. Roma por la absolucion por su proce
El alcalde miraba impasible los tor der con el obispo de Zamora, creyen
mentos de aquella desgraciada muger, do que habia incurrido en las censu
ue con las astillas en ¿ dedos, á ca ras eclesiásticas, porque aunque por un
a golpe de mazo que daba el verdugo breve de Clemente VII de 27 de mar—
gritaba: Nuestra Señora, valedme! zo de 1523 se hallaba autorizado para
¡Nuestra Señora, valedme! proceder contra los eclesiásticos que
Perdió el sentido y se suspendió habian tomado parte en las comunida
el tormento. des, era con sujecion á los cánones, y
Aquella misma tarde el alcalde nunca pudo creerse autorizado para
02 CAUSAS CELEBRES.

imponer y ejecutar la pena de muerte narse ante la opinion, y la conciencia


á un obispo aun sin el menor conoci pública, que ninguna fuerza es bas
miento de la autoridad eclesiástica. tante á dominar.
Tan grave pareció el caso en Roma, Asi es que á pesar de la absolu
tanto escándalo produjo en aquella cion que el papa dispensó al alcalde
época en la cristiandad el suplicio de Ronquillo, á pesar de su ostentosa
Acuña, que á pesar de hallarse en el penitencia en Palencia, el pueblo le
apogeo de su poder Cárlos V y de la miró siempre como un réprobo, como
constante presion que ejercia sobre un sacrílego, como un condenado, y
la córte romana, tardó once meses en así es que á su muerte en 1552, vein
obtener la absolucion despues de ha te y seis años despues del jurídico
ber mediado muchas consultas y teni asesinato del obispo de Zamora, se
do que vencerse grandísimas dificul forjó la ridícula tradicion que se ha
tades. conservado en Valladolid hasta nues
Vino por fin despues de cerca de tros dias, de que el cuerpo de Ronqui
un año de negociaciones la absolucion llo fué arrebatado por los demonios
para el rey, y la de Cobos, Ronquillo de su sepulcro del convento de San
los alguaciles y escribanos que ha Francisco de Valladolid, y nosotros
¿ entendido en el informal proceso mismos antes de la demolicion de este
y ejecucion de la muerte del obispo. convento, hemos oido contar con cán
La absolucion del rey vino en un dida sinceridad al enseñarnos un agu
breve aparte, y sin someterle á peni jero que se veia en lo alto de la bóve
tencia pública. da de la iglesia que por alli los de
La absolucion del secretario del rey
monios se habian llevado el cuerpo del
don Francisco Cobos vino encomenda alcalde Ronquillo.
da al nuncio de Su Santidad el car En vano algunos críticos entonces
denal Salviati, y Sevilla presenció el y en nuestros dias demuestran con
espectáculo de ver al ministro del em documentos que el alcalde Ronquillo
perador en trage de penitente postra no habia muerto en Valladolid y si en
do en la catedral ante la imágen de Madrid el 9 de diciembre de 552, y
Nuestra Señora de la Antigua, oyendo que no fué trasladado su cuerpo al
unas vísperas con una vela encendida convento de San Francisco de Valla
en las manos, como un penitenciado, dolid sino á su enterramiento de fami
y abjurando de la accion en que habia lia en el convento de monjas de Santa
tomado una parte como ministro del María la Real de Arévalo.
reV.
ºias dura fué la penitencia impues por Lala voz
voz de los críticos fué sofocada
del pueblo; la verdad quedó
ta al alcalde don Rodrigo Ronquillo y oscurecida ante la absurda tradicion,
á sus agentes. Fué comisionado por el acogida ávidamente por el vulgo, ami
papa para imponérsela el obispo de go siempre de lo maravilloso.
Palencia, don Pedro de Sarmiento. Varios escritores como Antonio Ca
Desde el convento de San Francisco, bezudo, en su Historia de antigüedades
con la cabeza cubierta de ceniza, los de Simancas; fray Dimas Sarpi, en su
pies descalzos y cubiertos de una túni tratado del purgatorio; el padre Anto
ca de grosero sayal, atravesaron las ca— linez de Burgos en su Historia de Va
lles de Palencia por entre un inmenso lladolid, dieron lugar en sus obras á
concurso para ir á la capilla mayor de esta tremenda tradicion, si bien sin
la catedral, donde el obispo despues de nombrar al condenado, hasta que don
haberles hecho recitar de rodillas con Pedro Ladron de Guevara, al anotar la
una vela verde en la mano los salmos historia inédita de Antolinez, atribuyó
penitenciales, les dió la absolucion. sin ninguna crítica y sin datos esta in
Magestuoso ejemplo del poder de la verosimil tradicion al alcalde Ron
Hglesia en aquella época en que hasta quillo.
la misma capital del cristianismo y su Estaba acorde esta aseveracion con
augusto pontífice habian estado domi la creencia popular, con el odio que el
nados y cautivos por la fuerza de un clero conservó siempre al alcalde Ron
rey, que sin embargo tenia que incli quillo; ¡qué mucho que adquiriese la
DON ANTONIO DE ACUÑA 93

esperiencia de una incontrovertible » Mañana referirás en el púlpito todo


verdad!.... »cuanto has visto y vas á ver. Dicho
Al hablar de las personas notables resto le bajaron á la iglesia, pues como
sepultadas en en el convento de San » era para ejecutar las órdenes del cie
Francisco de Valladolid dice: »lo podian entrar en los lugares sagra
«dos, y al acercarse al sitio donde es
«Despues de la muerte de un cierto »taba enterrado el desgraciado, los de
»jurisconsulto, un fraile de San Fran »monios levantaron al instante la losa
»cisco que debia predicar acerca del » y se pusieron de rodillas al rededor de
» oficio difuntos, como era costum » la sepultura, teniendo en las manos
»bre cuando se tributaban los últi »hachas encendidas. El gefe mandó en
»mos honores á personas de un ran »tonces al fraile fuese á la sacristía, se
»go , elevado, se retiró la noche pre » pusiese una sobrepelliz y trajese un
»cedente á la biblioteca del con— » cáliz, lo que verificado inmediatamen
»vento para preparar su discurso: »te, dispuso se aplicase éste á los la
»mas hallándose ocupado en este tra »bios del cadáver, que al momento ar—
»bajo, siendo ya una hora bastante »rojó en tierra la forma que habia re
»avanzada y en que reinaba el mas »cibido antes de morir. Hecha esta ce
» profundo silencio, vino á interrum— » remonia, la fué á depositar al comul
»pirle un sonido estrepitoso de trom »gatorio, hasta donde le acompañaron
»petas que le asustó en términos de »algunos de los demonios alumbrándo
» obligarle á ocultarse debajo de una » le con sus hachas, y entre tanto los
»mesa. A pocos momentos, estando en » demas se apoderaron del cuerpo y
»esta actitud, vió entrar á un gran » desaparecieron con él. A pocos ins—
º número de enlutados, á quienes man »tantes descargó en la ciudad una tem
»dó uno de ellos, que parecia ser el » pestad tan terrible, acompañada de
»gefe, trajesen el alma del desgracia »truenos y relámpagos, que todos des
»do jurisconsulto: en efecto, un es »pertaron y encomendaron su alma á
»pantoso ruido de cadenas anunció »Dios, creyendo que aquella era su úl
» bien pronto la llegada del tropel de »tima hora. Al dia siguiente refirió el
» demonios, conduciéndola en medio »fraile en el púlpito todo lo que habia
» de llamas, la atormentaban de diver »pasado.»
» sos modos.
»El que presidia ordenó entonces á En nuestros dias, el célebre poeta
»uno de ellos leyese el proceso y sen don José Zorrilla, tomando por base es
»tencia que S. M. Divina había hecho ta tradicion, esplicándola con la licen
»instruir y pronunciado contra él; lo cia de un poeta, atribuyendo á una in
º se verificó en alta voz, concluyen triga de córte lo que hoy, en el estado
»do con estas palabras: En considera escéptico del siglo repugnaria como en
»cion á los terribles pecados con que se los tiempos antiguos atribuir á un mi
»hallaba carqada á la hora de su muer lagro, ha compuesto un drama de El
»te el alma de este juez, le hemos con— alcalde Ronquillo ó el diablo en Valla
»denado y condenamos desde hoy á pri dolid.
»sion perpetua en el infierno, en cuerpo En él hace decir á Ronquillo al al
»y alma. Uno de ellos preguntó enton zarse de su sepulcro:
»ces: ¿cómo haremos publicar esta sen
»tencia? ¿y cómo para apoderarnos del Comprendo, si, mi inmensa desventura;
»cuerpo? porque vos sabeis que esto Mañana el rey y el pueblo castellano -
»nos está prohibido. Coged á ese fraile Vacía encontrará mi sepultura,
» que está oculto bajo esa mesa, dijo el Y el castigo creyendo sobrehumano,
Mi nombre execrará la edad futura,
»presidente, él publicará mañana lo Con mi fantasma soñará el villano,
»que ha visto y oido, y nos traerá ade Y de mi fin la tenebrosa historia
»mas en este momento el cuerpo del Guardará con horror en la memoria.
»maldito: con efecto, sacaron al malha a a • º • « º s - º « - -

» dado fraile, de quien es por demas re


»ferir el miedo, y se le dijo mostrán— Dileque aquesta histora trasmitida
ndole el alma en medio de las llamas: Será mañana al pueblo: mas velada
9. CAUSAS CELEBRES.

En misteriosas nieblas, referida la ronda del castillo cuando huia, á


Por la lengua del púlpito sagrada, pretesto de buscarle una soga para
Por la presente edad no comprendida, descolgarse, se aleja y no vuelve á
Por la futura edad no interpretada,
Muro será de tradicion tremenda saber nadie desde entonces de su pa
Que la gloria del rey guarde y defienda. radero, y el presbítero Ortega huye
por entre los vecinos que acudian á los
- - º e a e º e - a - º e
gritos del hijo del alcaide, y corre á
esconderse en la casa donde habitaba
Eso dirás al rey: él solamente antes de ir á vivir al castillo.
Lo entenderá: tras sí de este edificio En la formacion de este proceso
Saldrá esta historia: el clero fácilmente los alcaldes de córte de la chancillería
Del diablo la dará por maleficio: de Valladolid Zárate y Menchaca co
Cundirá como tal entre la gente,
Llegará como tal al Santo Oficio, mienzan siguiendo todos los trámites
Que en esta tumba encontrará espantado marcados por el derecho, empero cuan
Ll prodigio infernal testificado. to estaba á punto de darse defensa al
Mas crea de esa historia incomprensible reo, llegó el alcalde Ronquillo y pres
La venidera gente lo que quierà.
¿Que obra del diablo fé; no era imposible.
cindiendo de toda fórmula, negándose
¿Que fué supersticion? tambien pudiera.
á toda defensa da tormento al reo, lo
Santa verdad ó fábula increible, sentencia y da garrote con una preci
No tendrá nunca esplicacion entera. pitacion sin ejemplo. En la sentencia
Llegan. Vamos de aqui. Vulgo sencillo, le condena por el hecho de haber to
Cree tú que el diablo se llevóà Ronquillo!... mado parte en la guerra de las comu
nidades de Castilla, cargo que ni una
sola vez se le hace en el discurso de
eSta Caul Sa.

La sentencia capital es llevada, á


Hemos referido la historia de don efecto á los seis horas de pronunciada,
Antonio Acuña, obispo de Zamora, su faltándose á todas las leyes civiles y
proceso, y la ejecucion de su sentencia canónicas, y omitiendo la degradacion,
de muerte en Simancas, y la tradicion circunstancia indispensable, tanto mas
que admitió el vulgo sobre la suerte de en un obispo, cuanto para juzgar al
SUl ¿ juez el alcalde don presbítero Ortega su cómplice en el
Rodrigo Ronquillo. proyecto de fuga el mismo Ronquillo
La muerte del alcaide Noguerol fué pasa la causa al juez eclesiástico.
un hecho del que no existe mas testi—. La degradacion ha sido en todas
monio que el del obispo, su asesino, in épocas necesaria para entregar al ver
teresado en presentarle como agresor. dugo una cabeza consagrada por la re
No es probable que Noguerol faltase al ligion. Asi se habia practicado en mu
obispo, cuando de él solicitaba benefi chos pueblos de la antigüedad, aun en
cios para sus dos hijos. No debió de los tiempos mas remotos. Entre los
haber lucha cuando Noguerol, hombre romanos las vestales no podian sufrir
vigoroso y fuerte, sucumbió á manos la pena de muerte sin ser antes degra
de un anciano como Acuña, el que solo dadas por los pontífices arrancándolas
sacó una ligera mordedura en un dedo solemnemente el velo y despojándolas
de la mano. Hubo alevosía, porque los de todos los ornamentos del sacerdo
cuchillos, la varilla de la cama en for— cio. Israel adopta la misma legislacion
ma de lanza, y el guijarro metido en la con respecto á los levitas. El cristia
funda del breviario, estaban prepara nismo desde sus primeros siglos adop
dos de antemano. No tuvo cómplices tó la degradacion, y la Iglesia antes
en la muerte, que debió repentina de poner al presbítero en manos del
mente nacer de un altercado, porque verdugo le priva del sagrado carácter
Esteban y el presbítero Ortega, que de que le habia revestido con la uncion
estaban en inteligencia con el obispo santa. Gran principio religioso á la vez
¿ proporcionar su fuga, no solo se y filosófico de que el hombre encargado
allan desprevenidos en la hora de la de representar la divinidad, el minis
perpetracion de la muerte, sino que tro de Dios quede si delinque degra
Esteban, que encuentra al obispo por dado de su altísimo carácter y digni
DON ANTONIO DE ACUÑA.

dad porque ya entonces al castigarle cia en Sevilla y Palencia, fueron actos


la justicia, la cuchilla del verdugo no consecuentes á la hipocresía del empe
viola ni profana á la representacion rador que teniendo preso por sus tro
de Dios sobre la tierra sino á un sa pas al papa en el castillo de San An
cerdote degradado, es decir, que ha gelo en Roma ocupada por las tropas
perdido por la Iglesia aquella cualidad. españolas, hacia celebrar contínuas
La degradacion borrando la uncion rogativas por la libertad del pontífice,
sagrada hace cesar la ordenacion, y es— cuya cautividad podia hacer cesar con
ta ceremonia terrible é imponente va una sola palabra.
acompañada de que la misma Iglesia ar El proceso sobre la muerte del al
roja de su seno al sacerdote entregán caide Mendo Noguerol no fué mas que
dole al brazo secular para que lo cas un medio, una ocasion ávidamente
tigue como á los demas, aprovechada para matar al último
Esta doctrina, consignada en los de los comuneros de gran nombre,
cánones y decretales pontificias, se ha que habia podido salvar hasta en
lla admitida en el Derecho Romano, y tonces su cabeza, ya por el carácter
en las leyes de Partida. de príncipe de la Iglesia, con que se
Justiniano en su novela 83 dice hallaba revestido, ya por la proteccion
terminantemente sobre este punto: — que le habian dispensado el papa Adria
Illud palan est, si reum esse putaverit no y sus sucesores, arrancando por
eum qui convenitur provincia presaes, et medio de una competencia, que jamás
pena judicaveril dignum , prius hunc se hubiera decidido, su causa á los
spotiari ab episcopo sacerdotali dignita complacientes y vendidos ministros
te et ita sub legum fieri manu. de Cárlos V.
Estos mismos principios están con La muerte del alcaide Noguerol,
signados en el código inmortal de las hizo que la córte mandase á Simancas,
Partidas. Espresamente hablan de ellos como han visto nuestros lectores, al al
las leyes 60 y 61 del título VI de la calde don Rodrigo Ronquillo y al ver
primer Partida. dugo Bartolomé Zaratan.
Por todas las leyes, por todas estas Hubiera valído mas que solo hu
consideraciones se atropelló en el pro biese mandado á este último, el resul
ceso del obipo de Zamora. tado hubiera sido el mismo, y menor
Verdad es que luego, se acudió á el escándalo. La sangre del obispo
Roma á solicitar la absolucion de tan— Acuña no hubiese manchado la toga
tos desafueros, y que si se presentaron española!!!
escenas estudiadas de pública peniten
IIIIMI VIIIININIIIIN •.

(1 ó 5s).

A mediados del siglo XVI ocupaba último suplicio fué condenado él mismo
la España el primer lugar entre las por todos cuantos tenian corazon sen
naciones del mundo. Con asombro y sible en su época, por todos cuantos
estremecimiento dió entonces al mun sepan apreciar los sentimientos natu
do el espectáculo de un príncipe here rales en la posteridad.
dero de una inmensa monarquía, acu La prision del príncipe Cárlos por
sado y condenado á muerte por su su propio padre, el proceso que se le
mismo padre. Triste y fatal historia, formó, su sentencia, la reserva y mis
cuyas verdaderas causas permanecie terio con que se rodeó, fué uno de los
ron entonces, y aun permanecen hoy Sucesos mas estraordinarios de su
en parte veladas de un oscuro mis siglo. -

terio. De esta trágica historia se apodera


. . ¿Fué la religion, la justicia ó la polí ron los escritores y los poetas estran
tica y el odio los que guiaron á un pa geros, y para satisfacer la pública cu—
dre á condenar á su propio hijo? riosidad nada omitieron, revistiendo
Con cuánto escándalo y horror no este sensible hecho con todos los ata
debió recibir el mundo la noticia de víos de la novela y del drama, pres
que un príncipe destinado para dar le tando á su protagonista el carácter se—
yes á una monarquía en cuyos vastos gun sus deseos, y enunciando los mas
dominios jamás se ponia el sol, y de opuestos juicios, y desfigurando á su
los que debia ser un dia soberano, y placer los sucesos, contribuyendo á
dispensador en ellos de la justicia era envolver aun en misterio mas denso
su víctima, y terminaba su existencia un hecho harto velado ya por la sus
que habian al aparecer saludado con picaz prudencia del rey Felipe II. tan
entusiasmo tantos reinos, bajo el sensi reservado en todas sus acciones.
ble peso de la sentencia de su padre y El abate San Real, escritor aprecia
de su rey!... bilísimo, hizo de la muerte del príncipe
Aun cuando el príncipe Cárlos hu don, Cárlos una magnífica narracion;
biese sido criminal, la clemencia de verdadera novela que con todas las galas
bió haber ejercido sus derechos en el de su imaginacion embelleció, escitan
corazon del rey Felipe II que era su pa do poderosamente el interés de sus
dre. lectores con episodios entretenidos de
Al condenar Felipe II á su hijo al amores, y buscan, en la rivalidad ce
98 CAUSAS CELEBRES.

losa del padre y del hijo la esplicacion ceñir la corona imperial, era aun el mas
de tan funesta catástrofe. poderoso monarca de su siglo. España,
Campistron hizo de la muerte del Nápoles, Sicilia, el ducado de Milan,
décimo quinto príncipe de Asturias una el Franco-Condado y los Paises-Bajos,
tragedia que obtuvo un éxito inmenso: Túnez y Orán en Africa, y las posesio
dice que tuvo razones invencibles pa nes inmensas del Nuevo Mundo reco
ra transportar la escena á Constantino nocian su autoridad. De carácter poco
pla y presentar en ella á Calogeano Pa franco, era tan suspicaz y tan disimu
leólogo, emperador de Grecia, que hizo lado que no se podian adivinar sus
sufrir á Andrónico su hijo el terrible intenciones, ni conocer los sentimien
suplicio de privarle de la vista con vi tos que agitaban su corazon. -

nagre ardiendo, suplicio comun de los Afectaba una gran frialdad de áni
príncipes en aquel imperio. mo, una gran modestia y un celo ar
Mercier y Langle compusieron ver diente por la religion, empero su pie
daderas novelas de este terrible su dad era poco ilustrada. Queria ser obe
CeS0, decido sin réplica, y la menor resisten
Schiller en su tragedia de don Cár cia encendia su cólera, pero disimula
los, revistiendo al príncipe de las mas ba su resentimiento hasta que estaba
bellas cualidades, para hacer resaltar en disposicion de vengar su injuria. De
el corazon de Felipe II, que pinta con este disimulo, de esta paciencia, dió un
los mas sombríos colores, presenta un notable ejemplo en esta causa.
príncipe tan lleno de brillantes cuali Aborrecia la guerra, y sin embar
dades y virtudes, que jamás el mundo go, tuvo que hacerla constantemente en
debió encontrarlo. -
su reinado. La única prueba de valor
Nosotros al escribir la muerte del personal que dió en toda su vida, ó
príncipe Cárlos fundados sobre los da por mejor decir, la única vez que se
tos históricos y documentos que han presentó armado de pies á cabeza de
llegado hasta nosotros, y que no des lante del enemigo, y á distancia que
truyó la suspicaz política de Felipe II, no podia ofenderle, fé en la batalla de
evitaremos el entregarnos á episodios San Quintin en Flandes el 10 de agosto
propios de la novela, ó de la imagina de 1557, en que quedaron completa
cion ardiente del poeta, porque no es mente derrotados los franceses, glo
cribimos ni una novela ni una trage riosa victoria alcanzada por el duque
dia, sino una causa histórica. de Saboya, y en cuya memoria se alzó
Procuraremos, pues, encontrar el en los campos de Castilla el monaste
verdadero recurso de escitar la aten rio del Escorial, ese gigante de las ar
cion de nuestros lectores haciendo tes, esa octava maravilla del mundo.
conocer al padre y al hijo, porque en— El rey don Felipe II habia tenido de
tonces se miraran con interés los prin su primera esposa, la princesa doña
cipales personages del terrible episodio María de Portugal, un heredero á las
que asombró al mundo en la primer muchas coronas que ceñian su frente.
mitad del siglo XVI. María de Portugal dió á luz en 8 de
A Cárlos V humillando en un cláus julio de 1545, en Valladolid, un prín
tro su frente fatigada con tantas coro cipe, á quien se puso el nombre de
nas sucedió su hijo Felipe II. Este ha Cárlos, en memoria de su augusto
bia nacido en España, habia habitado abuelo, y tambien porque su madre era
constantemente en ella, habia adopta hija del rey de Portugal Juan III y de
do sus costumbres, sus hábitos, su len Catalina, cuarta hermana del empera
gua: debió fijar naturalmente en ella dor Cárlos V.
la capital de su gobierno, el centro de A los pocos dias de haber dado á
su política, el objeto de sus proyectos luz al heredero de la inmensa monar
y cuidados. La casa de Austria habia quía española, aquella reina que era
quedado, la abdicacion del imperio el encanto de sus pueblos, bajó al se
or su padre, dividida en dos ramas. pulcro, y las fiestas y regocijos con que
na ocupaba el trono imperial de Ale la nacion celebró el nacimiento del
mania, la otra gobernaba la España. príncipe de Asturias se cambiaron en
Felipe II, aunque no habia podido luto. No parecia si no que un triste
-
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS, 90
-
-

¿? presidia al nacer aquel rar el no haberlo tenido por rey la


eredero de Felipe II, porque apenas España con lágrimas amargas.
salido al mundo perdió su madre, que Los poetas Campistron , y Schiller
hubiera sido indudablemente un fuerte han pintado á este príncipe de tal modo
apoyo en las desgracias que estaba que inspiran el mas vivo y tierno inte
destinado á pasar, y con sus cuidados rés: verdad es que la ley que se impone
maternales y con una buena educa el poeta es hacer verter lágrimas á los
cion le hubiera preservado de servir al espectadores en la tragedia. Otros his
mundo de escándalo y dejar en la his toriadores como Leti y Brantome han
toria una mancha de sangre en el rei puesto en gran relieve las buenas cua
nado de su padre. ¿ de don Cárlos. Nos le pintan
María de Portugal era una princesa de un carácter opuesto al de Felipe II.
bellísima: Felipe la habia preferido á El hijo tenia una pasion dominante por
Margarita de Francia, hija de Francis la guerra, el padre era pacífico. El hijo
co I, la que casó despues con Manuel ganaba los corazones por sus atracti
Filiberto, duque de Saboya. Huérfano, vos personales, el padre inspiraba un
privado del apoyo de su madre desde respeto que se mezclaba con la repul
su cuna, el príncipe Cárlos creció lejos sion por su aire severo, su gravedad
de su padre, ocupado constantemente afectada y frio continente: el hijo tenia
en hacer las guerras de Inglaterra, una tintura de diversos idiomas y se
Flandes y Alemania. acomodaba al genio de diversos paises,
No conoció las caricias paternales el padre solo sabia el español y solo
que rodean al niño desde la cuna y le apreciaba su nacion. El hijo con todas
imprimen los primeros sentimientos del las gracias de un esterior agradable,
corazon. Se crió lejos de él bajo la di hermoso color, la mas bella cabeza del
reccion de los archiduques Maximilia mundo, ojos de fuego y de espresion,
no y María y de la princesa doña Jua el aire animado, y el padre con esa fi
na de Portugal, su tia paterna, regen sonomía sombría y glacial, en que se
tes y gobernadores de España durante pintaba el disimulo y la desconfianza.
las ausencias de su abuelo y de su pa De todas estas contrarias opiniones
dre. Cuando Cárlos V, abdicando sus de los escritores, que por las pasiones
coronas en Bruselas, vino á España de que se hallaban animados se separan
¿? sepultarse en el monasterio de de la verdad al pintar á don Cárlos,
an Yuste, á su paso por Valladolid vió los unos como un héroe, los otros como
á su nieto el príncipe Cárlos, y aquel un malvado, creemos que el autor que
gran monarca de grandes talentos y mas se aproxima á la verdad, que
vastísimas concepciones, formó, segun manteniéndose en un justo medio se
refieren casi todos los escritores, un ha separado de todas las exageracio
concepto muy poco favorable de la nes, es nuestro célebre historiador don
educacion y del carácter de su nieto. Modesto Lafuente. Nosotros hemos.
Diversos son los retratos que han visto á este concienzudo historiador
hecho los escritores de don Cárlos. de nuestro pais en el archivo de Si
Partidarios los unos de Felipe II, que mancas desenterrar del polvo en que
riendo justificar las acciones de este hacia siglos yacian, preciosos documen
rey, han pintado á don Cárlos cual un tos, para escribir con un criterio y
príncipe que tenia grandes vicios, de una filosofía dignos del siglo de Tácito,
un natural malo, perverso, é indoma la historia de nuestra nacion. Asi es
ble. La compasion que inspira un que hemos consultado sus observacio
grande infortunio hace que no demos nes con preferencia, porque ellas apo
entero crédito á estos historiadores; y yadas en auténticos y no conocidos
esta compasiones sin duda la que ha dul documentos hasta ahora, llevan la con
cificado el cuadro que han formado otros viccion al ánimo de los lectores.
de don Cárlos, borrando todos sus de Nada es mas propio para caer en
fectos para representarle cual un prín un error al juzgar del carácter de un
cipe amable, cual un modelo de los re príncipe que fundarle sobre una ac
yes; que á ser cierto lo que sus enco— cion cualquiera; se necesita mucha
miadores han escrito de él, debió llo atencion y observaciones minuciosas
9
100 CAUSAS CELEIBRES.
Tr

para que formemos la idea de él tal y prestigio de un maestro. La corres


cual es. pondencia seguida entre el preceptor y
Nosotros vemos una pasion domi su padre comprueban el genio incorre
nante en el príncipe don Cárlos, que uble y desaplicado de este príncipe, y
se descubre y se revela en las ocasio ueron tambien el principio de que un
nes en que mas necesidad tenia de hombre de la severidad de Felipe Il,
ocultarla. Don Cárlos tenia ambicion, empezase á mirar con tibieza á aquel
altivez, sentia en su alma toda la gran hijo cuyas circunstancias y cualidades
deza de su nacimiento. Y este orgullo eran tan contrarias á las suyas. Tam
inseparable en un príncipe tan pode poco el trato continuo, el roce diario,
roso, no habia podido ser templado esas relaciones íntimas que solo la pre
por la educacion. sencia da, pudieron preservar de la ti
Sus tendencias á la crueldad se bieza un corazon de suyo tan frio como
descubren desde muy niño viéndole en el de Felipe II. Por su parte el príncipe
tretenerse en destrozar por sus pro— no sentia tampoco ningun sentimiento
pias manos los conejos vivos que le de ternura por su padre, no esperi
traian de la caza, los pájaros que caian mentando hácia él mas que los de te
en sus manos, y gozarse á la vista de mor al principio y de odio despues.
la sangre y de sus miembros palpitan— Es falso cuanto algunos autores han
teS. querido decir de que el enojo de don
Felipe II quiso que adquiriese una Cárlos contra su padre proviniese de la
grande instruccion. Nombró por su ayo mudanza del destino que se dió á la
á don García de Toledo, hermano del princesa Isabel de Valois, hija de En
duque de Alba, y para que le enseña rique II y de Catalina de Médicis, pro
sen la lengua latina, cuando apenas metida primero por esposa al príncipe
contaba nueve años de edad, escogió á Cárlos, que á su llegada á Madrid con
Honorato Juan, uno de los mejores hu trajo matrimonio con Felipe II, viudo
manistas de su siglo, y al padre fray en aquel entonces de su segunda muger
Juan de Matienzo. Honorato Juan fué María de Inglaterra, y que habiendo
despues una de las lumbreras del epis contrariado la pasion de su hijo y de
copado español, porque habiéndose he la reina le engendró una pasion celosa
cho eclesiástico á la edad de cincuenta que no terminó sino con la muerte del
años, el rey Felipe II, recordando siem príncipe Cárlos y de la reina Isabel.
pre los buenos servicios que le habia Los escritores que han querido dar un
prestado y el cuidado que habia tenido carácter novelesco á la terrible enemis
con el príncipe don Cárlos, le hizo obis tad del padre y del hijo no han discur
po de Osma. Al lado de estos hombres rido que no podia existir una pasion
de los mas eminentes que contaba en fuerte entre un jóven de trece años y
tonces España, dejó Felipe Il al mar— una niña de doce que jamás se habian
char á Inglaterra á su hijo: pero éste visto. Ademas, el rey Felipe II no era el
se manifestó díscolo y desaplicado; anciano decrépito que nos han pintado;
díscolo acometiendo á golpes á su ayo era un hombre entonces de treinta y
don García de Toledo, un dia que le tres años, rodeado de la aureola y del
reprendia, por lo cual hizo éste su di prestigio que le prestaba el ser el mo
mision, que le admitió Felipe II nom narca mas poderoso de su tiempo.
brando en su lugar á Rui Gomez de Las bodas del rey Felipe II y de
Silva, príncipe de Eboli, el que á pe Isabel de Valois se celebraron en Ma
sar de su ancianidad y de su dignidad, drid el 2 de febrero de 1560, siendo
no pudo contener ni tener mas en padrino el mismo príncipe , don Carlos
respeto al príncipe. La menor cosa y la princesa doña Juana de Portugal,
bastaba para encolerizarle. su tia. -

En cuanto á los estudios, diversas Veinte dias despues, reunidas las


veces el mismo Honorato Juan tuvo córtes del reino, fué jurado solemne
ue proponer á Felipe II que le llamase mente por sucesor de la monarquía el
su lado, para º su autoridad pater príncipe de Asturias. Alli, en el seno
na y su cariño alcanzasen de él lo que de las córtes, recibió en la iglesia de
no podia conseguir toda la autoridad San Gerónimo, el homenage de los
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS. 401

procuradres de los pueblos y de los re recia sobre todo en ella el estudio de


presentantes del clero y de la grande— las humanidades y de la teología, y
za. El príncipe se hallaba entonces ata Felipe II queria que el príncipe siguie
cado de unas cuartanas, y sea el mal se cultivando el latin que habia comen
humor que ocasiona esta enfermedad, zado y aprendido, aunque no con gran
ó por consecuencia de su caráter im de aprovechamiento, desde la edad de
petuoso, habiéndose olvidado en el ac nueve años. Tampoco era indiferente
to de la ceremonia el duque de Alba de al rey que tuviese gran trato con los
besarle la mano cuando los demas gran consumados teólogos, que todas las re
des, distraido con el cuidado de dirigir ligiones tenian en sus colegios de Al
aquella solemne ceremonia, que á él calá.
estaba encomendado, procedió con tal Para que distrajesen al príncipe, y
descomedimiento y descortesía contra evitasen el tedio que le hubiera cau
el duque, que el mismo Felipe II le sado el trato esclusivo de los doctores
obligó á que diese una satisfaccion á y religiosos, quiso el rey que le acom
aquel magnate, á quien miraba ya el pañasen dos jóvenes de su augusta
príncipe Cárlos con gran prevencion, sangre.
que debia acabar despues de un modo Fueron destinados á vivir con él en
tan violento y ser una de las causas el palacio arzobispal donde se fijó su
que influyesen mas en su adverso y mansion con la sencilla ostentacion
triste destino. que usaba la córte, su tio don Juan
El mal de las cuartanas continuó de Austria, y su primo el príncipe de
aligiendo con tenacidad al príncipe. Parma Alejandro Farnesio.
Palido, demacrado, al ver su salud alte— Tres jóvenes sobre cuyas cabezas
rada el rey Felipe II se alarma, y cree habia la Providencia de hacer pesar un
deber dilatar el matrimonio que tenia dia tan diversos destinos. El nacido
concertado con la princesa Ana que á ocupar el trono de la nacion mas po
habia, nacido en Cigales, pueblo de derosa entonces del mundo, debia ba
Castilla la Vieja, en 1549, y que era hi jar en la flor de su edad al sepulcro
ja de los reyes de Bohemia sus tios, Ma marchita su frente con la sentencia
ximiliano y María, gobernadores en otro real y la maldicion paterna, y los otros
tiempo de España. Instaban los reyes de dos brillar como grandes y aguerridos
Bohemia porque se verificase este en capitanes y ceñir sus frentes con el
lace que debia un dia colocar sobre las laurel de la victoria!..
sienes de su hija la mas bella corona Don Juan de Austria era hijo natu-.
del universo. Felipe II lo dilata mani ral del emperador Cárlos V. Habia na
festando que no puede en conciencia cido en Ratisbona el año de 4547.
permitir se verifique un matrimonio Jamás bastardo alguno, al decir de
para el que estaba inhábil su hijo por la historia, fué de tan alto nacimiento
su enfermedad. por ambas partes, porque aun cuando
Consulta sobre si seria conveniente pasa por el hijo de Bárbara Blomberg,
enviarle á Málaga, Gibraltar ó Murcia, flamenca de rara belleza con la cual el
haciendo que los corregidores de estas emperador habia tenido amores, mu
ciudades le informen sobre la bondad chos creen que la madre de don Juan
de su clima y probabilidad de su cu era hermana del emperador, y que pa
TaCIOn. ra salvar el honor de ésta, consintió
Determinóse al fin el rey á mandar Bárbara en pasar por madre de don
le á Alcalá de Henares, poblacion que Juan, en lo que, como dice Bayle, no ha
situada en una llanura, y ventilada bia gran mérito, porque pocas damas
por buenos aires reunia á las condi habria en aquella época que no se cre
ciones higiénicas que prescribian los yeran muy honradas con ser las que
médicos, a proporcion de tener una ridas de tan grande emperador.
de las universidades mas célebres en Traido desde muy niño á España,
tonces en el mundo, á donde cursaba fué puesto por órden reservada del em
las letras la flor de la juventud espa perador al cuidado del honrado señor
ñola bajo la direccion de los mas emi de Villagarcía don Luis Quijada, el
nentes y consumados maestros. Flo cual y su digna esposa lo criaron con
102 CAUSAS CELEBRES.
-
-

tanto esmero y cuidado cual si fuera El domingo 19 de abril de 1562, á


hijo suyo. las doce y media del dia, al bajar el
El emperador no lo habia reconoci príncipe por una escalera angosta del
do por hijo suyo, durante su reinado; palacio arzobispal se resbaló, rodó al
despues de su abdicacion lo tuvo algu gunos escalones y vino, á dar contra
nas veces en San Yuste á su lado, y al una puerta que se hallaba cerrada.
morir declaró al rey Felipe II el her Terrible fué la conmocion que es
mano que le quedaba en Vera, re ¿ con el golpe, y grandes las
eomendándoselo mucho, encargándo meridas que recibió en el rostro y en
le lo destinase á la carrera de la Iglesia. la cabeza. Aquellas heridas y aquellas
Luis Quijada para mejor ocultarle contusiones que en un principio no
lo que era, no le vestia sino de paño parecieron dar cuidado alguno, se
pardo como un aldeano, y lo acostum complicaron despues de tal modo que
braba al trabajo y á la fatiga. Don Juan pusieron en grave riesgo su existencia
manifestaba gran aversion al estado y fué necesario apelar á los remedios
eclesiástico y mucha aficion á la carre mas heróicos que conoce la cirugía.
ra de los armas. Sentia ya desde niño Fué necesario hacerle la operacion
el genio que tan alto habia de elevarle del trépano, esta operacion terrible y
en la guerra. delicada, que generalmente deja un
Cuando Quijada, despues de ha sello de perturbacion en el cerebro de
berle educado como su hijo, le descu los pacientes: fué necesario ademas,
brió su estado y condicion, y se arro sajarle tambien los párpados de ambos
jó á sus pies antes de presentarle al ojos.
rey, don Juan que siempre habia crei A la noticia del grave riesgo en que
do ser el hijo de aquel honrado ancia se hallaba el heredero de la monarquía
no, lo vió de rodillas con tanta tran española, Felipe II, que se hallaba en el
quilidad cual si largo tiempo antes hu Escorial, marchó inmediatamente á ver
biese esperado aquella admirable mu á su hijo, y ordenó que por todas par
danza. No vió nada en la nueva gerar tes se hicieran rogativas públicas para
quía á que le llamaba el rey su her implorar de la Divina Providencia su
mano superior á su valor. Asi es restablecimiento. Resonaron todos los
que no le desvaneció su nueva po templos de los diversos reinos sujetos
sicion; y cuando fué reconocido de im á la dominacion de Felipe con himnos
¿ en una partida de caza en Va demandando la vida del hijo á quien
ladolid por el rey Felipe II, y dotado pocos años despues el mismo padre
cual correspondia á un príncipe de la habia de mandar matar. -

sangre, la córte vió con admiracion Alcalá de Henares poseia en su re


que aquel que hasta entonces habia cinto el cuerpo de un bienaventurado
pasado por hijo de don Luis Quijada, lego de la órden de San Francisco, por
se acostumbró en menos de media hora cuya mediacion obraba el Señor contí
á ser el hijo del emperador. nuos milagros sobre su sepulcro. El
Felipe II trató de que acabasen de cuerpo de fray Diego de Alcalá fué lle
educará don Juan de Austria, con los vado procesionalmente desde la iglesia
¿ don Cárlos y don Alejandro de San Francisco hasta el palacio arzo
arnesio, á quienes aventajaba don bispal, donde se hallaba moribundo y
Juan con mucho en las prendas de sin esperanzas de vida el príncipe don
ánimo, en la gallardía del cuerpo y en Cárlos.
la disposicion del ingenio. Con fé ardiente el jóven príncipe se
Juntos en Alcalá siguieron sus es abrazó á la caja que encerraba el des
tudios los tres jóvenes príncipes, pro pojo mortal del santo lego, y, desde
curando al mismo tiempo el cuidado de aquel momento comenzó á restablecer
los médicos robustecer la quebrantada se su salud, y se concibieron esperan
salud de don Cárlos, cuando una im zas de que podria salvarse el príncipe
prevista desgracia vino de pronto á al heredero. Desde entonces éste y el rey
terarla de un modo sensible, y que Felipe II, profesaron tan gran devocion
influyó poderosamente en todo el resto al santo á cuyo milagroso contacto se
de su vida, - habia comenzado la curacion, siendo
EL PRINCIPE DE ASTURAS DON CARLOS. 103

esto orígen de que con el mayor celo y mos citar de su carácter altivo, impe
eficacia activase el rey Felipe II la cano tuoso y escéntrico. Paseándose una
nizacion del bienaventurado fray Die noche por las calles de Madrid, y ha
go. Desde entonces ha quedado tambien biendo caido sobre su vestido una
la costumbre de traer al palacio el san ca de agua que por casualidad arroja
to cuerpo cuando enferman de peligro ron de una casa, mandó á uno de los
los reyes; costumbre constantemente que le acompañaban que fuese á dego
seguida por la dinastía austriaca y la llar á sus habitantes y poner fuego á
de Borbon, y que nosotros hemos pre ella para vengar a eli, equeña é im
senciado dos veces en el reinado de pensada injuria. El guardia no se atre
Fernando VII. vió á ejecutar una órden tan bárbara y
Habia recobrado la salud el prínci cruel, y volvió diciendo que no habia
pe don Cárlos, pero su cerebro, habia podido hacerlo porque habia entrado el
quedado profundamente lastimado. Asi Viático en la casa para un enfermo de
lo denotaba lo inconexo de sus accio ¿ y asi logró aplacar su enojo.
n otra ocasion, habiendo mandado el
nes, y la frecuente irritabilidad de su
carácter, ya de suyo impetuoso, y que rey que le hicieran unos botines, por
adquirió una nueva violencia. que los halló demasiado ajustados, los
La salud del príncipe no fué com hizo cortar en menudos trozos delante
pleta desde entonces; asi es que á los del que los habia trabajado, y se los
dos años de este suceso, en 1564, vol hizo comer en su presencia.
vió á recaer gravemente, y en 19 de Otro dia, á don Alfonso de Córdova,
mayo ordenó su testamento, en que su gentil-hombre de cámara, hermano
mandaba se le enterrase con el hábito del marqués de las Navas, lo agarró en
de San Francisco en el convento de San un momento de cólera para arrojarle
Juan de los Reyes de Toledo, sin que por la ventaria, lo que hubiera verifi
se le hiciese sepulcro alguno de escul cado á no habérselo impedido los de
tura, y sin mas que una lápida de jas mas gentiles-hombres y criados, que
pe; dispuso grandes sufragios para el acudieron á las voces que daba el infe
descanso de su alma; hizo algunas man liz, que no se defendia contenido por
das en las personas de su servidumbre, el respeto.
y recomendó que se activase y proce Otra vez hizo llamar á un cómico
diese á concluir la canonizacion del célebre nombrado Cisneros, que se ha
beato fray Diego de Alcalá, á cuyo con llaba desterrado de Madrid por el pre
tacto habia debido su mejoría en 1562, sidente del Consejo de Castilla, el ar
espresándose con estas notables pala zobispo cardenal ¿ Diego de Espino
bras, escritas todas de su puño y letra: sa, en ocasion en que se preparaba pa
porque estando en la dicha ¿ ra representar una comedia en el cuar
desahuciado de los médicos y dejado del to del príncipe. Fué tal la irritacion
rey mi padre, fué traido el cuerpo de que le causó el ver al presidente, que
dicho padre, llamado santo fray Diego. con su puñal en la mano salió á su en
Estos sentimientos religiosos le eran cuentro, é insultándole le dijo:
inspirados por su confesor, el padre -Curilla, ¿ á mi os atreveis vos, no
fray Diego de Chaves, que procuraba dejando á Cisneros que venga á servir
moderar y templar su carácter, cada me? Por vida de mi padre que os he de
vez mas impetuoso é irritable por la matar. ¿Os atreveis á apostarlas conmi
enfermedad. go, impidiendo á Cisneros que venga á
Muchas veces eran vanas sus cristia Madrid?
nas persuasiones y las de sus ayos, con El presidente se arrojó á sus pies,
las reprensiones del rey; nada hacia suplicándole con mucha mide
impresion en el espíritu y corazon del le perdonase; y de este modo logró
príncipe: trataba con dureza á sus cria aplacarle, pero mas que nada con la
-

dos, diciéndoles sin causa ninguna pa presencia de algunos grandes de España


labras injuriosas y descorteses, y lle que intervinieron.
gando alguna vez hasta el estremo de Cuantos le servian se hallaban en
darles de bofetadas. contínuo peligro, y estos escesos, y
Muchos son los lances que pudiéra la inconexion con que hablaba algu
104 CAUSAS CELEBRES.

nas veces y escribia, dieron bien pron que hubieran despoblado unos paises,
to á conocer que su cabeza habia pa de donde sacaba la mayor parte de sus
decido una perturbacion mental , , y "CCUII"SOS. -

que no estaba hábil para regir un dia Felipe II despreció estas altas con
los destinos de esta grande monar— sideraciones, hizo revivir los edictos
uía. Por esta causa , por lo escaso olvidados largo tiempo, y los hizo eje
e su talento y capacidad, el rey no le cutar con severo rigor. Margarita, du
admitió en el Consejo de Estado, ni en quesa de Parma, hija natural de Cár
el despacho de los negocios públicos, los V, gobernaba la Flandes, y aunque
cosa que el príncipe, que era ambicio inclinada á la moderacion, su ministro
so, deseaba vivamente. el cardenal Granvela, hombre inaccesi
El príncipe tenia un odio implaca ble á la piedad, dió lugar á grandes que
ble á llui Gomez de Silva, su ayo, jas y disturbios. Pidieron los flamencos
príncipe de Eboli, al duque de Alba, y la destitucion del ministro, y no la ob—
al presidente del Consejo, cardenal Es tuvieron, pero disgustado éste, tuvo
pinosa, que eran de la mayor confian que retirarse prudentemente temien
za del rey, y á quienes miraba como do las turbaciones que él mismo habia
espías encargados de velar sobre su suscitado. Estableció para estirpar los
conducta para darle cuenta de todas errores de la heregía, un tribunal que
sus acciones. Censuraba casi de contí no se llamó en verdad la Inquisicion,
nuo, con poco decoro y sin ningun res empero que estaba revestido de todos
peto el gobierno de su padre, y las los poderes de esa terrible institucion.
providencias que tomaba; y muy per El príncipe de Orange, el conde de Eg
suadido de que se oponia al matrimonio mont y Horn que tantos servicios ha
que deseaba contraer con la archidu bian prestado á Cárlos V, los principa
quesa Ana de Austria, oposicion que les señores, todos forman una liga sa
no mostraba franca y decididamente grada, y confirman su juramento de
sino dilatándolo á pretesto de su salud, obedecer al soberano, pero protestan
formó el proyccto de escaparse de Es do oponerse con todos sus medios á las
paña é irse á Alemania, no tanto para pretensiones de este tribunal ilegal,
esto, cuanto para favorecer las miras siendo el objeto de su confederacion
de los rebeldes en los Paises Bajos. resistir la tiranía, sin pretender des
Era sumamente crítica la situacion truir la religion establecida. Llamóse
de estos paises que habian sido el ob esta liga de los pordioseros, porque asi
jeto predilecto de su abuelo el empera los llamaron los ministros de la princesa
dor Cárlos V. Mientras habian desapa por sus reclamaciones, denominacion
recido las libertades de Castilla bajo el de que se gloriaron los confederados,
duro yugo del emperador, los Paises llevando desde entonces en sus som
Bajos solo habian conservado alguna breros ó en el pecho á manera de con
independencia, y aunque Cárlos V ha traseña, una escudilla. La regenta mis
bia introducido tropas estrangeras en ma conoce la justicia de los confedera
ellos, y habia faltado á sus fueros y dos, y recomienda sus peticiones á
privilegios, como Flandes era su pa Madrid (1556); empero los diputados
tria, la amaba; se rodeaba de flamen flamencos son tratados en Madrid como
cos, les confiaba los cargos mas impor sediciosos, y rios de sangre corrieron
tantes de la corona, y su preferencia en los Paises Bajos.s
se vió recompensada por el celo que Muchos historiadores han dicho que
por su gloria mostraron esos paises, el príncipe don Cárlos mantenia una
por el afecto que profesaban á su per grande inteligencia con los rebeldes de
sona. Las ideas protestantes encontra los Paises Bajos, y que trataba de irse
ron eco en los Paises Bajos, y aunque á poner á su cabeza: han añadido que
Cárlos, para sofocar en su gérmen las se hallaba en comunicacion con el con
nuevas doctrinas, habia fulminado se— de de Egmont, el marqués de Berguer
veros edictos, cuando vió que los pro y el baron de Montigny, diputados de
testantes se disponian á emigrar y Flandes que habian venido á la córte;
transportar á otros reinos sus riquezas, habian tenido con él grandes conferen
suspendió la ejecucion de sus edictos, cias, y el príncipe les habia mostrado
EL PRINCIPE DE ASTU RAS DON CARLOS. 103

el mayor afecto. Estos le representaron del príncipe la respuesta tan cortés y


el triste estado en que se hallaba la comedida del pundonoroso y valiente
nobleza de Flandes, y las prevenciones duque de Alba, sacó un puñal el prín—
desventajosas que el cardenal de Gran cipe, y abalanzándose al duque, le dijo:
vela, principal ministro de la gober —Antes os atravesaré el corazon que
nadora, le habia inspirado contra ella. consentir en que marcheis á Flandes.
Con las lisonjas y adulaciones que hi El duque de Alba no pudo librarse
cieron á este príncipe, y el arte é in— del golpe del desatentado príncipe, si
triga con que supieron remover sus no abrazándose estrechamente á él, á
pasiones, lo decidieron á su favor. Te fin de paralizar su accion, sujetándole
nia un placer sin igual en hablar con los brazos, lo que consiguió facilmente,
el baron de Montigny, en abrirle su co— á pesar de la diferencia de su edad,
razon, enteramente dispuesto á favor porque era mas fuerte y vigoroso que
de los flamencos. don Cárlos. Asi, cogido con los dos bra
Cuentan que cuando los condes de zos, y estrechando al príncipe cual si
Egmont y de Horn fueron presos, el quisiese abrazarle, empezó á dar voces
duque de Alba encontró entre los pa pidiendo socorro. Entonces entraron
peles del conde de Egmont una carta algunas personas de la servidumbre, y
de don Cárlos que le comprometia al el príncipe se retiró. -

tamente. La ida á Flandes era su sue Este suceso escandaloso no pudo


ño favorito, la realizacion de todas sus permanecer en el silencio. Habia sido
ilusiones. Asi es que al saber que Fe un desafuero cometido contra una de
lipe II habia nombrado para sujetar las primeras personas y mas respeta
aquellos rebeldes paises al duque de bles de la monarquía, y habia tenido
Alba, que iba á marchar al frente de por testigos á todos los criados y ser—
un ejército numeroso y bien discipli vidumbre del príncipe. Dióse conoci
nado, el príncipe don Cárlos sintió he miento de todo al rey, el que en este
rida en lo mas vivo su ambicion, y vió nuevo atentado vió una prueba mas de
disipadas sus mas gratas esperanzas, y la conducta irregular de su hijo, y sir—
no pudo ver sereno que le diesen una vió para que se aumentase la antipatía
comision que deseaba para sí, porque recíproca que entre ambos reinaba ya
queria pasar á aquellas provincias de de muy antiguo.
cualquier modo que fuese y con cual Disimuló, aun todavía Felipe II, é
quier motivo, fingiendo tener compa hizo que el duque de Alba devorase en
sion de los males que sufrian aquellos silencio la afrenta ¿ habia recibido,
pueblos. ¿ deseando que el duque marchase con
Asi cuando el duque de Alba fué á a mayor brevedad para evitar nuevos
besar la mano del príncipe para des lances, le dió las instrucciones corres
pedirse, lleno de cólera y furioso, le pondientes y el título de teniente ge
dijo que él era el que debia hacer aquel neral de los estados de Flandes, con la
viage é ir de gobernador á los Paises misma autoridad que si él en persona
Bajos, y que si se atrevia á tomar esta marchase alli.
comision y privarle de la gloria que Ya entonces no conoció límite ni
le podia resultar, le quitaria la vida freno la impaciencia del príncipe por
antes que sufrirlo. En vano el duque, marchar á Flandes.
movido del respeto que debia al here Exasperado cada vez mas al ver que
dero de su rey, procuró aplacarle, ha á pretesto del estado de su salud se
ciéndole presente que no iba mas que diferia su proyectado matrimonio con
á restablecer la tranquilidad de aque la princesa Ana, su prima, atribuyén
llas provincias para que el príncipe dolo á intriga del rey y del cardenal
pudiera pasar despues á ellas sin peli Espinosa, y como para mejor desde
gro alguno: que ahora solamente debia alli pasar á los Paises Bajos, proyectó
procurar vivir tranquilo y conservar el pasar á Alemania sin licencia ni con
su vida tan preciosa para la monarquía, sentimiento de su padre.
y que á él no le tocaba sino obedecer y Necesitaba para verificar su fuga
cumplir las órdenes que su padre le contar con algunos parciales. Creia te
habia dado. Lejos de aplacar el ánimo ner estos, porque cuantos se llegan á
44
106 CAUSAS GELEBRES

los príncipes, lo hacen siempre adu cion ni limitacion alguna, de acompa


lándoles y lisongeándoles hasta sus ñarle por todas partes y hacer cuanto
mas temerarios proyectos; empero le exigiese de él. Entonces don Juan se
faltaban tambien fondos, recurso in negó lisa y llanamente; rehusó tomar
dispensable, y estos no era tan fácil el un compromiso de semejante naturale
haberlos á las manos. za sobre sí, y don Cárlos, lleno de ira
Con el poco tacto, con el ningun y de cólera le despidió de su presen
juicio que presidia á todas sus accio cia, confuso de haber sido demasiado
nes, intentó levantar fondos para su imprudente para revelarle su secreto.
descabellada empresa. Para esto hizo Era demasiado previsor don Juan
que su gentil-hombre de cámara Gar de Austria, conocia demasiado el ca
cía Alvarez Osorio, pasase primera rácter receloso y suspicaz de su her
mente á Castilla y Andalucía á pedir mano Felipe II, y media con toda la
prestado á doce grandes de los princi ¿ de su buen talento todo el
pales de España, dirigiéndoles una cir abismo en que veia precipitarse al
cular refrendada por Martin Gaztelu, príncipe don Cárlos y en que habia
con fecha de 1.º de diciembre de 1567. querido precipitarle á él mismo. Asi es
De este modo, él mismo, á un proyecto que, temeroso de que el rey supiese
que debia ejecutarse con el mas pro por algun otro las confianzas que el
fundo secreto, le daba publicidad. Seis príncipe le habia hecho, quiso ser el
cientos mil ducados era la cantidad que primero en descubrírselas para mere
se proponia levantar por medio de es cer por este servicio las buenas gracias
tos empréstitos; pero los grandes y y el favor del rey su hermano, que en
señores á quienes pedia estos socorros efecto despues le colmó de sus favores.
para una necesidad que se le ofrecia, ¿Debia don Juan, que no sabia toda
respondieron que estaban prontos á vía á fondo los pensamientos y las
dárselos, con tal de que no fuese con conspiraciones que sin duda en su
tra el rey. Era harto conocida en toda mente tramaba el príncipe don Cárlos,
la nacion la mala inteligencia que rei revelárselos al rey y perjudicar á su
mala entre el padre y el hijo, porque sobrino? Cuestion es esta que mejor
las disensiones de los palacios se tras puede resolverse con el corazon que
piran muy pronto, y son alimento á la con la cabeza. El cortesano venció so
murmuracion de los pueblos; de consi bre el hombre honrado, y sobre el
uiente, no podian prestarse sin com compañero de la juventud del estra
prometerse decididamente, á una trai viado don Cárlos. Todos los sentimien
cion, á un proyecto cuyos fines igno tos que éste habia manifestado contra
raban. rios á los de su padre desde sus pri
Don Cárlos quiso asociar á sus des meros años y el odio que tenia á sus
cabellados proyectos á don Juan de favoritos, le impelian á alejarse de él.
Austria. Le hizo un dia buscar por dos Conocia la antipatía que su padre le
de sus mas íntimos confidentes, y le tenia, antipatía que sus imprudencias
preguntó si queria seguirle y secun aumentaban cada dia mas. Entre otras,
darle en una empresa de la mayor im una amarga burla habia irritado contra
portancia, y que sin contradiccion de él el ánimo de Felipe II. Hijo de un pa
lbia producirles á los dos infinitas ven dre que habia hecho tantos viages en
tajas. Don Juan era un jóven cuyo ta Europa, era Felipe II el príncipe mas
lento y prevision auguraba ya los fu sedentario. Su hijo hizo un libro
turos destinos que le reservaba en la para burlarse de su padre que tenia
monarquía española la Providencia; asi por título: Los viages de Felipe II, y
es que le aseguró que estaba dispuesto en cada una de las páginas siguientes
á servirle en todo, fuera de lo que fue en blanco puso estos epígrafes: Viage
se perjudicial al servicio y á la perso del Escorial á Toledo, de Toledo á Ma
na del rey su hermano. No satisfizo al drid, de Madrid á Aranjuez, de Aran
príncipe don Cárlos esta promesa vaga juez al Pardo, del Pardo al Escorial,
y propia de la destreza de un cortesa y de este modo llenó todo el libro de
no: insistió fuertemente en que era los viages del rey a los sitios reales.
preciso le diese su palabra sin es eu A las noticias que habia recibido el
-
\

EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS. 07

rey de los proyectos de fuga de su hi director de correos hace sacar secreta


jo, y las que él anteriormente habia ad mente de Madrid todos los caballos de
quirido, se añadió el haber sabido la que podia disponer, y él mismo se di
vuelta de García Alvarez Osorio con rige al Escorial donde se hallaba enton
ciento cincuenta mil ducados que a ces el rey. -

pesar de las negativas de los grandes Aun don Cárlos intenta una nueva
habia podido recabar de varias perso y última tentativa con don Juan de
nas de Andalucía. Entonces Felipe II, Austria, en que vuelve á ponderarle
reunió un consejo de conciencia al que las ventajas de que se asocie á su des
llamó varios teólogos y juristas, como tino y proyectos. Si hubiese estado en
el maestro Gallo, el confesor fray Die su sano juicio el cerebro de don Cárlos,
go de Chaves y el célebre jurisconsulto si hubiese tenido, por poca que fuese,
Martin de Azpilcueta, mas conocido alguna penetracion, habiendo ya pro
por el doctor Navarro, y les sometió la bado á don Juan la primera vez, no se
cuestion de si podia en conciencia se hubiese descubierto enteramente en
uir callando y aparentando ignorar esta segunda conferencia. Empero, ce
os proyectos de su hijo, dándole tiem gado por la pasion, y careciendo del
po y lugar para que pudiera ponerlos talento de conocer las gentes á quien
en ejecucion y sorprenderle en el acto debia ó no confiar sus secretos, nece
para tener un justo motivo de poderle sariamente debia tener su empresa el
aplicar el castigo que señalaban las le éxito que tuvo. Pidió á su tio don Juan
yes. Debatióse esta grave cuestion y sus consejos y socorros. Le abrió su
el doctor Navarro demostró lo erróneo corazon con toda la espansion de la
de semejante conducta, lo peligroso inesperiencia del jóven, y no le ocultó
que era para el rey el aguardar á que nada para ganarle y atraerle á su par
se consumasen los ¿ de su hijo, tido. Aquel procuró calmarle; no lo
debiendo en su opinion precaverlos co consiguió. Prometió guardarle el secre
mo padre para no tener que castigarlos to; pero don Juan era demasiado polí
como rey. Fray Diego de Chaves, con tico para cumplirlo.
fesor del principe, y que por su cargo Vuelve apresuradamente Felipe ll
debia conocer mas á fondo las inten desde el Escorial en vista del aviso del
ciones de éste, viendo que no podia correo mayor Tarsis, y aunque resuel
apartarlo de los proyectos que traia en to á obrar para atajar el mal que veia
su acalorada cabeza, habia ya ante inminente, nada deja traslucir en su
riormente formado y llevado á efecto semblante, siempre frio y austero, ni
la resolucion de retirarse á su con nada deja entender en sus palabras:
Vent0. Recibe á su hijo Cárlos con su glacial
Mientras el padre consultaba y dis afabilidad, y al dia siguiente, domin
cutia lo que debia hacer con su des go 18 de enero, sale á misa en público
atentado hijo, éste se disponia á obrar con el príncipe Cárlos, y con los prín
decididamente. Ya con dinero, el 17 cipes de Hungría y de Bohemia que se
de enero de 1568 escribe al correo ma hallaban entonces en Madrid. Ninguno
yor ó director general de correos, para en la córte pudo apercibirse de la terri
que le tuviese preparado caballos de ble tormenta que iba á estallar dentro
posta para la noche inmediata. de pocas horas, y que sordamente rugia
Don Raimundo de Tarsis, que era el ya en el corazon del sombrío monarca.
director de correos, recela que en esta Una sola persona habia á quien su pro
peticion hecha con tanta premura se pia conciencia le hacia preveer un gran
encuentre algun proyecto que podia SUl CCSO.
ser contrario al servicio del rey, y co La repentina vuelta del rey des
nociendo el carácter colérico del prín de el Pardo, precisamente en la no
cipe, le contesta que todos los caba che en que debia fugarse, habia alar
llos se hallaban ocupados sirviendo en mado al príncipe don Cárlos. En vano
diferentes carreras. No era el principe habia tratado de leer en el semblante
don Cárlos hombre que se satisficiese de su padre lo que pasaba en su men
con esta contestacion: insta, apremia, te. El rostro del rey estaba habituado
apura de nuevo. En este conflicto el á espresar una impasibilidad inaltera
º
08 CAUSAS CELEBRES.

ble. Sus músculos no cedian como en efecto de las violentas emociones que
los demas hombres á las impresiones le habia causado su cólera se sintió
de su alma. Habíale llamado la aten algo indispuesto aquella misma tarde,
cion una larga conversacion que su y se recogió acostándose mas pronto.
padre habia tenido con don Juan de Habia llegado para Felipe II el mo
Austria: recelaba de éste á quien el mento de obrar. Aquel sombrío silen
dia antes tan imprevisora é impruden cio, observado por tantos años con los
temente habia revelado su secreto. Asi desmanes de su hijo iba á romperse,
es, que despues de haberse terminado é iba su voz á llevar el terror á todos
la funcion religiosa en la capilla real los pueblos de la monarquía española,
y retirado el rey á su cámara, el prín y el asombro á todas las naciones del
cipe Cárlos al llegar á su cuarto, á mundo. Se habia revelado por diversas
donde le acompañaba su tio don Juan, veces la profunda antipatía del hijo
cerró la puerta de su aposento, y le con el padre; iba pues á revelarse la
¿, por qué le advertia que esta antipatía del padre con el
a triste y como pesaroso, qué era lo ijo, si bien cubierta con el manto del
que habia hablado con su padre. Don servicio de Dios y del reino. -

Juan de Austria le refirió entonces que Era poco antes de la media noche,
el rey le habia hablado del apresto de cuando el rey acompañado de Ruy Go
varias galeras que se estaban armando mez de Silva, príncipe de Eboli; del
para enviar á América. No quedó sa duque de Feria; del prior de San Juan,
tisfecho de la conversacion don Cárlos, don Antonio de Toledo, y de don Luis
aun le insinuó sus recelos de que Quijada, ayo que habia sido de don
altando á la fé de caballero hubiese Juan de Austria y caballerizo del prín
hablado á su padre de los proyectos cipe, se dirigió silenciosa y callada
que en confianza le habia manifestado. mente á la cámara del príncipe real,
Don Juan procuró desvanecer sus sos— que dormia en un profundo sueño, por
pechas, empero porfiando cada vez mas que se habia acostado en la mayor se
el príncipe, y exigiendo con el tono y º y sin el menor presentimiento
ademan colérico que le eran tan fami e la desgracia que le aguardaba. La
liares nuevas y terminantes esplicacio puerta de la estancia del principe ha
nes, se acaloró la conversacion hasta bia quedado cuidadosamente abierta,
el último término. Sacó su espada el porque asi lo habia prevenido antici
príncipe Cárlos, y don Juan de Aus padamente el rey al conde de Lerma y
tria, que no era hombre de dejarse á don Rodrigo de Mendoza, gentiles
mancillar por nadie, desenvainó la su hombres del príncipe.
ya tambien, y poniéndose en guardia Entró el rey, á quien acompañaban
con tono firme y resuelto le dijo: Tén ademas varios empleados de palacio
gase W. A. con martillos y clavos. Tan profundo
La cámara del príncipe de Asturias era el sueño del príncipe don Cárlos,
iba a ser el teatro de una lucha cuyo y tan calladas las pisadas con que ca
éxito de seguro no hubiera sido dudo— minaba el rey y su comitiva, que pudo
so, cuando atraidos por las voces la éste llegarse, sin que aquel se aperci
servidumbre que se hallaba en la régia biese, hasta la misma cabecera de su
antecámara haciendo saltar el pestillo cama. Cogió el rey una pistola que te
que sujetaba la puerta, la abrieron, y nia debajo de su almohada, y la espa
vieron al tio y al sobrino espada en da que tenia junto á la cabecera, y se
mano y dispuestos á una sangrienta la dió al duque de Feria.
CSCena. Despertó azoradamente el príncipe,
Don Juan de Austria, al ver las y poniéndose en pié esclamó al ver al
gentes que habian acudido, y hombre, rey delante de sí:
tan prudente como animoso, se retiró —¿Qué quiere V. M? ¿Qué hora es
contento con haber evitado su propia esta? ¿Quiere V. M. matar ó prender?
defensa, cuyas consecuencias inmen— —Ni lo uno, ni lo otro, respondió
sas eran fáciles de imaginar. el rey con la mayor tranquilidad y san
Quedó solo vociferando y exhalan gre fria; y á una señal suya los cama- .
do su rabia el frenético príncipe, y por reros que habian entrado con clavos y
EL PRINCIpE DE ASTURIAS DON CARLOS. 100

martillos comenzaron á clavar las puer uno de los grandes encargados de su


tas y ventanas. -
custodia debia dormir siempre dentro
Entonces el príncipe, entrando en de su cámara, á la que no se permitia
el mayor furor, trató de arrojarse en entrar recado alguno sin espresa ór
ún gran fuego que habia encendido en den primero del rey, y sin haber pres
la cámara real, siendo necesario que le tado antes juramento ante el secre
sujetase, para que no se abrasase en él, tario Pedro del Hoyo. El gefe prin
el prior de San Juan, don Antonio de cipal de , esta guardia particular y
Toledo. Tambien fué necesario arran privilegiada, encargada de custodiar
carle de las manos un candelero, con en su prision al príncipe heredero,
el cual , queria matarse; y entonces, fué Ruy Gomez de Silva, príncipe de
hincándose de rodillas, suplicaba á su Eboli.
padre que le matase, que si no se ma Era necesario conocer el carácter
taria él mismo. de don Cárlos para figurarse la situa
—Sosegaos, príncipe, le contestó el cion de su alma. Seguramente en los
rey con su ordinaria sangre fria, y rimeros momentos de su furor se hu
volveos á la cama, que lo que se hace iese matado, si no le hubiesen desar—
es por vuestro bien y remedio. mado y sujetado. La severidad de su
Mandó quitar la lumbre de la chi padre, su desgracia, aquella súbita re
menea; se apoderó de todos los papeles volucion en la víspera de su partida,
que contenia un escritorio, y de varias la prevision de la desgracia que le
armas de fuego que habia en un cofre amenazaba, la antipatía invencible que
debajo de su cama. habia entre él y su padre, á cuya cóle
El príncipe habia mandado á un ra se hallaba entregado sin defensa al
maestro cerrajero francés, que traba guna, todo esto hacia nacer en su ca
jaba en el Escorial, que le hiciese una beza diferentes pensamientos que ago
cerradura para su cuarto que no pu biaban su alma, y le hacian sucumbir
diese abrirse sino por dentro. Todas bajo su peso. Mirábase en el colmo del
las noches colocaba debajo de las almo infortunio: altivo, orgulloso, de una
hadas dos espadas y dos pistolas: no imaginacion viva y ardiente, abrasado
queria ser sorprendido durmiendo; em por sus pasiones, todo lo llevaba á la
pero todas estas precauciones hemos estremidad.
visto cuan vanas fueron. Felipe II, por otra parte, que tenia
Cerradas y clavadas las ventanas, una antipatía á su hijo igual á la que
salióse el rey de la estancia, dejando éste le profesaba, batallaba interior—
su cuidado por aquella noche al duque mente entre mil encontrados proyec—
de Feria, al marqués de Lerma, y á tos. Deseaba ardientemente verse libres
Mendoza, exigiéndoles juramento de de su hijo, que miraba como su mas
que tendrian á buen recaudo al prín grande enemigo. Vacilaba ante la opi
cipe; colocando ademas en las piezas nion que formaria el mundo de sus ac
inmediatas cuatro monteros de Espino tos, y queria que la justicia, prevale
sa V cuatro alabarderos. ciendo sobre toda suerte de considera
El servicio de la guardia inmediata ciones, le autorizase á hacer sufrir á su
al príncipe se repartió en lo sucesivo hijo un suplicio capital. Estaba firme
entre el duque de Feria, el de Lerma, mente persuadido de que la partida y
Ruy Gomez de Silva, el prior don Anto fuga proyectada de su hijo á los Paises
nio de Toledo, Luis Quijada y don Juan Bajos, no tenia mas objeto que irse á
de Velasco, relevándose de do: en dos poner á la cabeza de aquellos rebeldes
alternativamente de seis en seis horas. que tantos disgustos le causaban, y que
Estaba mandado que no se entrase en tantos tesoros y sangre costaron á la
la cámara cuchillo ni instrumento al nacion.
guno cortante, y para servir la comida No se ocultaba á su prevision que
se estableció la vigilancia mas esqui en los ánimos de todos en aquel enton
sita y las mayores precauciones. No se ces pasaria por un padre bárbaro é in
permitia tampoco hablar alli en secre humano si inrnolaba á su odio á su pro
io, ni con persona de fuera; la puerta pio hijo, el heredero de su reino, que
debia permanecer siempre abierta, y por este título augusto, tanto como por
40 CAUSAS CELEBRES,

ser hijo suyo, deberia estar al abrigo rey dirigió al ayuntamiento de Madrid,
de un suplicio. y parecidos fueron los que comunicó á
En la cruel perplejidad en que se las demas ciudades del reino:
hallaba, convocó al dia siguiente, 19 de
enero, á todos los Consejos con sus pre EL REY.
sidentes en su cámara, y les hizo pre
sente que se habia determinado, por Concejo, justicia y regimiento de la
convenir asi al servicio de Dios y del villa de Madrid, sabed: que por algu
reino, á proceder contra su hijo por las nas muy justas causas y consideracio
causas que á su tiempo les declararia. nes que conciernen al servicio de Dios
Felipe II, al pronunciar estas palabras, y bien y beneficio público de estos rei
dejaba ver las lágrimas con que se ar— nos, entendiendo que para cumplir con
rasaban sus ojos. la obligacion que como rey y padre te
Al dia siguiente nombró el rey una nemos, lo habiamos asi proveer y orde
comision ó tribunal para que entendie nar; habemos mandado recoger la per
se en la causa del príncipe don Cárlos. sona del serenísimo príncipe don Cár
Este tribunal, compuesto á voluntad los, nuestro hijo, en aposento señalado
del rey, lo formaron el cardenal Espi dentro en nuestro palacio, y dado ór
nosa, inquisidor general y presidente den en lo que á su servicio, trato vi
del Consejo de Castilla; don Ruy Go— da toca. Y por ser esta mudanza de la
mez de Silva, príncipe de Eboli; el con- cualidad que es, nos ha parecido justo
de de Melito; el duque de Pastrana, y decente hacéroslo saber para que en
consejero de Estado; el duque de Fran-tendais lo questá hecho, y el justo fun
cavila, mayordomo mayor del rey, y el damento y fin que se tiene y lleva, y
licenciado don Diego Briviesca Munta- que habiendo Nos venido á tomar y
ñones, consejero de Castilla, á quien se usar deste término con el dicho ser e
dió el encargo de dirigir el órden del nísimo príncipe, se debe con razon
roceso y su sustanciacion, recibiendo creer y juzgar que las causas que á ello
as declaraciones de los testigos el se- nos han movido han sido tan urgentes
cretario Pedro del Hoyo, todos bajo la y precisas que no lo habemos podido
presidencia del rey. excusar; y que no embargante el dolor
El ver á la cabeza de este tribunal al y sentimiento que con amor de padre
cardenal Espinosa, inquisidor general desto podreis considerar que habemos
del reino, ha sido sin duda el motivo tenido y tenemos, habemos querido
por el que muchos autores han creido preferir á la obligacion en que Dios nos
que la causa del príncipe don Cárlos puso por lo que toca á estos nuestros
fué sometida al juicio de la Inquisicion; reinos, súbditos y vasallos dellos, á los
error en que incurrió Llorente al es— cuales, como tan fieles y leales y que
cribir la historia de este tribunal, pero tambien nos han servido y han de ser—
que no puede sostenerse á los ojos de vir, con tanta razon amamos y estima
la sana crítica, y porque están en con mos. Y porque á su tiempo y cuando
tra de semejante asercion todos los do fuese necesario entendereis mas en
cumentos de aquella época. particular las dichas causas y razones
No bastaba que Felipe II hubiese desta nuestra determinacion, por aho
hecho la manifestacion del gran suceso ra no hay mas de que advertiros. De
de la prision del principe de Asturias Madrid, 22 de enero, 1568.—Yo EL REY.
al mundo oficial, es decir, á los conse
jeros suyos; se creyó que habia necesi Necesitaba tambien Felipe II justi
dad de comunicar tan grave suceso á ficar un paso tan estraordinario á los
todos los pueblos de la monarquía; y ojos de la Europa. Asi es que escribió
asi escribió el rey á todas las ciudades, al emperador y á la emperatriz de Ale
prelados, cabildos, consejos, goberna mania, á la reina de Portugal, á todos,
dores y corregidores, dándoles cuenta los soberanos de Europa, al pontífice
de aquel suceso gravísimo que llevó á romano, y al duque de Alba, que se
todas partes de la monarquía el terror, hallaba sometiendo los Paises Bajos, re
el asombro, y el estremecimiento. belados por causas religiosas contra la
Esta es la carta ó manifiesto que el España, si bien á todos ellos lo hizo en
EL PRINCIPE DE ASTURAS DON CARLOS. 111

términos vagos y generales, que no po tiempo y su término; ni tampoco lo he


ian revelar las causas verdaderas de tomado por medio, teniendo esperanza
la prision, pero en que se veia bajo el que por este camino se reformarán sus
velo del misterio y de la duda, que en escesos y desórdenes. Tiene este nego
la prision del príncipe iba virtualmen cio otro principio y raiz, cuyo remedio
te decretada la sentencia de su muerte. no consiste en tiempo ni en medios, y
Como muestra de estas cartas, pre que es de mayor importancia y consi
sentaremos á nuestros lectores algunas deracion para satisfacer yo á la dicha
de las mas principales... La que dirigió obligacion que tengo á Dios y á los di
á la reina de Portugal en 20 de enero, chos mis reinos; y porque del progre
es decir, al dia siguiente del suceso, so que este negocio tuviere y de lo que
estaba concebida en estos términos: en él hubiere de que dará W. A. parte
y razon, se le dará contínuamente; en
Aunque de muchos dias antes del esta no tengo mas que decir de supli
discurso de vida y modo de proceder cará V. A., como madre y señora de
del príncipe mi hijo, y de muchos y todos, y á quien tanta parte cabe de
grandes argumentos y testimonio que todo, nos encomiende á Dios, el cual
para esto concurren, sobre que ha dias guarde á V.A. como yo deseo. De Ma
respondí á lo que V. A. me escribió lo drid, á 20 de enero, 1568.—Besa las
que habrá visto; y entendido la nece— manos de V.A. su hijo,—EL REY.
sidad precisa que habia de poner en
su persona remedio, el amor de padre Aquella misma tarde habia hecho
y la consideracion y justificacion que llamar al Nuncio del papa, arzobispo
para venir á semejante término debe de Rosado, para decirle que en la con
preceder, me he detenido buscando y ducta que habia observado con su hijo
usando de todos los otros medios y re habia sido movido por motivos de reli
medios y caminos que para no llegar á gion, á los que habia sacrificado su ter
este punto me han parecido necesarios. nura paternal. Asi Felipe II cubria bajo
Las cosas del príncipe han p sado tan el manto respetable de la religion una
adelante y venido á tal estado, que pa causa puramente política, como mas
ra cumplir con la obligacion que tengo adelante investigaremos. Hé aqui la
á Dios como príncipe cristiano, y á los carta que escribió al papa con fecha
reinos y estados que ha sido servido tambien de 20 de enero, el dia si
de poner á mi cargo, no he podido es— guiente de la prision del príncipe.
cusar de hacer mudanza de su persona
y recogerle y encerralle. El sentimien Muy Santo Padre: Por la obligacion
to y dolor con que esto habré hecho, comun que los príncipes cristianos tie
V. A, lo podrá juzgar por el que yo sé nen, y la mia particularmente, por ser
que tendrá de tal caso como madre y tan devoto y obediente hijo de Vues
señora de todos; mas en fin, yo he que tra Santidad y de esa Santa Sede, de
- rido hacer en esta parte sacrificio á darle razon como á padre de todos, de
Dios de mi propia carne y sangre, y mis hechos y acciones, especialmente
preferir su servicio y el bien y benefi— en las cosas notables y señaladas, me
cio público á las otras consideraciones ha parecido advertir á Vuestra Santi
humanas: las causas, asi antiguas como dad de la resolucion que he tomado en
las que de nuevo han sobrevenido, que el recoger y encerrar la persona del
me han constreñido á tomar esta reso— serenísimo príncipe don Cárlos, mi
lucion, son tales y de tal calidad, que primogéñito hijo; y como quiera par
ni yo las podria referir, ni V. A. oir satisfaccion de Vuestra Santidad, y
sin renovar el dolor y lástima, demas para que de esto haga el buen juicio
que á su tiempo las entenderá W. A. que yo deseo, bastaría ser yo padre, y
Solo me ha parecido ahora advertir que á quien tanto va y tanto toca el honor,
el fundamento de esta mi determina estimacion y bien del dicho príncipe,
cion no depende de culpa, ni inobe juntándose con esto mi natural condi
diencia, ni desacato, ni es enderezada cion, que como Vuestra Santidad y to
á castigo, que aunque para esto habia do el mundo tiene conocido y entendi
suficiente materia, pudiera tener su do, es tan agena de hacer agravio, ni
12 , CAUSAS CELEBRES.

proceder en negocios tan árduos sin De Vuestra Santidad muy humilde


gran consideracion y fundamento; mas y devoto hijo don Phelipe, por la gra
con esto asimismo es bien que Vuestra cia de Dios rey de España, de las Dos
Santidad entienda que en la institu Sicilias, de Ilierusalem, que sus muy
cion y crianza del dicho príncipe des santos pies y manos besa,—EL REY.
de su niñez, y en el servicio, compa
ñía y consejo, y en la direccion de su En esta carta, asi como en todas las
vida y costumbre se ha tenido el cui demas, Felipe II hace un odioso retrato
dado y atencion que para crianza é de su hijo. ¿ hacer creer, y nos
institucion del principe é hijo primo— otros tambien debemos creerlo por ho
génito y heredero de tantos reinos y nor á la humanidad, que habia habido
estados se debia tener, y que habién en su corazon un terrible combate en
dose usado de todos los medios que tre la ternura paternal y el deber que
para reformar y reprimir algunos es le obligaba á prender á su hijo. Nada
cesos que procedian de su naturaleza olvida para persuadir que ha tenido
y particular condicion eran convenien que hacerse gran violencia para llegar
tes, y héchose de todo esperiencia en á aquel estremo, empero que á ello le
tanto tiempo hasta la edad presente han , determinado razones urgentes.
que tiene y no haber todo ello bastado, Acude siempre la religion en socorro
y procediendo tan adelante y vinién de su política, y como anuncia grandes
dose á tal estado, que no parecia ha resoluciones quiere preparar , al papa
ber otro ningun remedio para cumplir para que reciba de un modo benévolo
con la obligacion que al servicio de la que pudiera adoptar. Toma todas las
Dios y beneficio público de mis reinos formas capaces de insinuarse en su es
y estados tenia, con el dolor y senti píritu á fin de que esté dispuesto á
miento que Vuestra Santidad puede justificarle de aquella sangrienta catás
juzgar, siendo mi hijo primogénito y trofe.
solo: me he determinado, no lo pudien No consiguió el objeto que se pro
do en ninguna manera escusar, hacer ponia con sus comunicaciones el rey
de su persona esta mudanza, y tomar don Felipe II. Don Luis de Venegas y
tal resoluccion sobre tal fundamento, Figueroa, embajador estraordinario, y
y tan grandes y justas causas, que el conde de Chantoney, embajador or
asi acerca de Vuestra Santidad á quien dinario en la córte ¿ emperador, tu
yo deseo y pretendo en todo satisfa vieron que trabajar mucho para calmar
cer, como en cualquier otra parte del el resentimiento de aquel príncipe y
mundo tengo por cierto será tenida de la emperatriz su esposa, que con
mi determinacion por tan justa y ne denaban altamente los procedimientos
cesaria, y enderezada al servicio de que se seguian contra el príncipe de
Dios y beneficio público, cuanto ella Asturias. -

verdaderamente lo es; y, porque del El papa suplicó al rey católico que


progreso que este negocio tuviere, y se limitase á dar á su hijo una correc
de lo que en él hubiere de qué dar cion paternal y caritativa, sin llevar
parte à Vuestra Santidad se le dará las cosas al último estremo. El rey de
cuanto será necesario, en esta no ten
Portugal, un gran número de príncipes
go mas que decir de suplicar muy hu y de prelados presentaron al rey ur
mildemente á Vuestra Santidad que, gentes y respetuosas esposiciones so
pues todo lo que á mí toca debe tener bre el mismo objeto. La misma reina
or tan propio como de su verdadero doña Isabel y la princesa Juana, no
ijo, con su santo celo lo encomiende solo intercedieron por la libertad del
á Dios Nuestro Señor, para que él en príncipe don Cárlos, sino que instaron
derece á que en todo hagamos y cum una y otra vez, aunque sin conseguir
plamos con su santa voluntad; el cual su objeto, para que se les permitiese
guarde la muy santa persona de Vues ir á ver y consolar al príncipe en su
tra Santidad y sus dias acreciente al al're St.O.
bueno y próspero regimiento de su uni El rey dirigia por sí mismo el pro
versal Iglesia. ceso, bajo la inspiracion de Briviesca
De Madrid, á 20 de enero, 1568. Muntañones. Para que sirviese de nor
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARI.OS. 113

ma, se envió á buscar á los archivos de esta sucesion en los reinos de Aragon,
Barcelona el proceso criminal que don Valencia, Sicilia y Cerdeña; pero los
Juan Il de Aragon habia formado en sicilianos y sardos ofrecieron la corona
otro tiempo al príncipe de Viana, don á don Cárlos, y éste contentándose con
Cárlos, su hijo. Se hizo traducir este aceptar el gobierno en nombre de su
proceso del catalan al castellano, y al padre, se reconcilió con éste, y obtuvo
mismo tiempo se pidió tambien al obis el condado de Barcelona. -

o de Barcelona el manifiesto que pu Acababa don Juan de dar su consen


blicó don Juan II en aquella ocasion, timiento para el matrimonio de Cárlos
haciéndolo tambien traducir del lemo con Isabel, hermana de Enrique IV,
sino al castellano, para comprender me rey de Castilla; la cruel madrastra Jua
jor el sentido y la energía de las pala na, enemiga siempre del príncipe, ha
bras. Hízose esta publicacion para que bia destinado en secreto aquella prin
semejante ejemplo hiciese callar á los cesa para su hijo Fernando, con quien
que sostenian que el heredero de la casó despues, y con este enlace que
corona se hallaba al abrigo de todo cas daron unidos todos los reinos de Espa
tigo y era inviolable como el mismo ña, El rey mandó á su hijo prisionero
V. á Zaragoza; los catalanes solicitaron
El príncipe de Viana don Cárlos, que fuese puesto en libertad, y ha
tuvo muchos puntos de contacto con elbiéndolo conseguido, nació de aqui un
príncipe Cárlos, objeto de esta causa.
pretesto para sublevarse los pueblos y
Hijo de Juan II, rey de Navarra y deslos estados de Navarra y Barcelona, los
¿ de Aragon, y de la reina Blanca, cuales declararon guerra á Juan II pa
mija y heredera de Cárlos III, rey dera libertará don Cárlos. El rey se vió
Navarra, era á la muerte de su madre forzado á cederle la Cataluña y á re
heredero de la corona de Navarra. conocerle por su heredero, y conce—
Juan ll contrajo segundas nupcias con derle el matrimonio con Isabel de Cas—
Juana, la hija del almirante de Casti tilla, el que no se realizó por la muer—
lla. Madrastra cruel, muger ambiciosa, te de don Cárlos, sucedida en 1461.
gobernaba el reino de Navarra maltra Los historiadores dicen que fué en
tando á don Cárlos, que era el que por venenado por la reina Juana, su ma
la sucesion de su madre debia ceñirse drastra.
la corona de aquel reino. Los pueblos Asi el ejemplo mismo que Felipe II
tomaron parte en su favor, coronaron queria tener á la vista, si bien le su
por su rey al príncipe, y trataron de ministraba la pauta que en el proceso
sostenerle contra su padre, que ven de un príncipe ¿o se habia se
ciéndole en el campo de batalla, le co— guido por su padre un siglo antes, tam
gió prisionero, le encerró en un casti bien encerraba la terrible leccion de
llo y le formó un proceso, cuyo éxito que los pueblos podian tomar parte por
hubiera sido indudablemente fatal al la causa de un príncipe encausado y
príncipe, á no haber temido el rey pa perseguido por su padre. Era un ele
dre las iras del pueblo y haber dado mento de que podian aprovecharse los
palabra el hijo de no ser rey de Navar descontentos, si bien Cárlos no podia
ra durante la vida de su padre. alegar derechos algunos ínterin vivie—
Impulsado mas tarde el príncipe de se Felipe II; pero bastante era mostrar
Viana por el rey de Castilla, olvida su distintas tendencias políticas, y sobre
palabra, vuelve á tomar las armas, y todo, en los sucesos de Flandes, en
tan desgraciado como la vez primera, ue á la cuestion política de indepen
queda derrotado, teniendo que huir á ¿ se habia unido la cuestion re
Nápoles acogiéndose á la proteccion de ligiosa.
su tio Alfonso, rey de Aragon, herma A pesar de la intercesion del papa
no mayor de su padre. Mediador éste y de los reyes de Europa, Felipe II se
entre las discordias del padre y del hi decidió á deshacerse de su hijo, en
jo, muere antes de haber podido veri quien miraba á un rebelde, y asi la
ficar entre ellos la reconciliacion. causa del principe don Cárlos conti
La sucesion de aquel príncipe per nuaba tratándose en el tribunal forma
tenecia al rey de Navarra, consistiendo do por su padre, º todo el misterio
v)
114 CAUSAS CELEDRES.

con que envolvia sus acciones el rey su atencion, toda su inquietud y redo
Felipe II, misterio que ya en aquella blaba sus sospechas. Las quejas y las
época dió mucho que hablar, y cuyos murmuraciones de los pueblos, que
rumores trasmitidos á la posteridad, siempre se colocan del lado del infeliz
han introducido la vacilacion y la duda que padece y que se lamentaban de la
en las causas que dieron márgen á es triste suerte de aquel príncipe jóven,
te Sul CeSO. en quien no veian defecto alguno y en
El motivo de la prision de don Cár quien solo contemplaban la desgracia
los fué puramente político. Su intento y el infortunio, hacia que al menor rui
era ir á Alemania sin permiso del º do que oyese en el palacio, temiese que
para realizar su casamiento con la fuera una conspiracion ó alguna rebe
princesa Ana, su prima, á la qué hacia lion para forzar la prision y arrebatar
tiempo estaba prometido, y cuyo ma á su hijo de donde le tenia encerrado.
trimonio diferia el rey alegando el es Siempre tenia en su imaginacion al
tado de su salud. Este casamiento, dig otro Cárlos príncipe de Viana, á quien
no y ventajoso para el príncipe, lo hu el pueblo habia sacado de la prision en
biera consentido su padre, porque no que le pusiera Juan II su padre.
repugnaba á sus miras políticas, como El rey, presidiendo el tribunal que
despues de su muerte lo dió muy bien habia formado, fué reuniendo cuidado
á conocer tomándola al quedar viudo samente todas las pruebas del crímen
por esposa; pero bajo este pretesto se de Estado que imputaba á don Cárlos.
encubria, y lo comprobaron documen Tomáronse una multitud de declara
tos de aquella época, el proyecto de ciones que inculpaban al príncipe de
pasar á los estados de Flandes á colo haber procurado establecer relaciones
carse á la cabeza de los rebeldes. Las con los rebeldes de Flandes.
relaciones que tenia el príncipe don Llegaba el momento de obrar.
Cárlos con el baron de Montigny, comi Entonces el rey convocó un con
sionado de Flandes, con el marqués de sejo de conciencia. Llamó á su pre
lbergues, y otros que perecieron poco sencia á los teólogos mas distingui
despues á impulsos de las iras de Feli dos y de mas reputacion en su épo
pe II, asi como una carta del príncipe ca, y les preguntó qué pena merecia
encontrada al conde de Egmont, pre don Cárlos, culpable del crimen cuyas
so y decapitado despues en Bruselas, pruebas tenia. Discordes anduvieron
comprueban que existia en el principe los pareceres de los hombres llamados
el proyecto deliberado de ir á apode á discutir sobre tan gran negocio, de
rarse de aquellos paises, y ceñir anti los hombres en cuya opinion esperaba
cipadamente en sus sienes una de las encontrar la tranquilidad de su alma
coronas que debian recaer en él por la Felipe II; porque los unos le aconseja
muerte de su padre. ban que perdonase apoyados en pode
Absorvia dtal modo al rey Feli rosísimas razones, y los otros se deci
pe II el negocio de la causa de su hijo, dian por un castigo severo.
ue al tiempo que habia condenado á. Los que opinaban porque la cle
on Cárlos á una reclusion estrechísi mencia reemplazase á la justicia en es
ma, y en la que era severamente vigi te negocio, fundados sin duda en el di
lado continuándose en su custodia el cho del filósofo antiguo de que si la
mismo método que se habia establecido justicia mata al criminal, la clemencia
desde el primer dia, él mismo tambien mata al crimen, decian que el crímen
estaba como preso en Madrid sin atre que se imputaba al príncipe don Cár
verse á mover de la capital ni ha los no habia llegado á tener ejecucion;
cer sus acostumbradas espediciones á debia mirarse solo como un simple pro
Aranjuez, al Pardo y aun al Escorial, yecto, como un conato, que no habia
habiendo dejado de ir á ver sus obre llegado á tener efecto: que los hombres
ros y el soberbio edificio que levanta no pueden estender su imperio sobre
ban. Habia renunciado hasta á esta di el alma ni sobre el pensamiento, el
version favorita, que fué la preocupa que debia hallarse solo sometido al
cion de toda su vida. tribunal de Dios. Dios único ha limita
La causa de su hijo escitaba toda do la dominacion al decir: no temais
*

EL PRINCTE DE ASTURIAS DON CARLOS. 4 3

á los que pueden quitar la vida del misma persona que el padre; por con
cuerpo; empero temedá aquel que puede siguiente castigar al hijo es castigar al
itar la vida del alma. (Lucas, XII— padre. Cubrir de oprobio al hijo, es
I—V). Se pretendia perseguir, es cubrir de oprobio al nombre del padre.
verdad, el designio de un crimen de Ver un rev sentado sobre el trono man
lesa magestad; mas para que hubiera chada su ¿ con la ignominia de la
este crimen era necesario que hubiese rebelion y humillada su cabeza por el
un principio de ejecucion. El hombre castigo, es un contraste terrible y no
sometido á sus pasiones es capaz de puede inspirar ningun respeto á sus
formar los designios y los proyectos estados. Podrá dejar de ser rey; pero
mas criminales; empero su razon viene jamás º dejar ni despojarse del
en su ayuda; los rechaza é impide su título de padre. Y el rey, que no pue
ejecucion. Castigar á un hombre por de dejar de ser padre, ¿podrá conde
que haya formado el proyecto de un nar á su hijo? Y si pudiese hacerlo,
crímen, cegado por sus pasiones, es solo la memoria de semejante suceso,
hacer un crímen de que el hombre siempre, sobre todo si llegaba á ejecu
tenga pasiones. Hasta que se ha ejecu tarse, seria su remordimiento SU1
tado el crímen que se ha proyectado, pesar. Si un príncipe es el padre de su
debe reputarse siempre que la razon pueblo y debe ser amado de él por es—
triunfará de aquel que lo va á cometer. ta cualidad, ¿cómo podria serlo si lle
¿Puede condenarse á un hombre en gaba á sofocar la ternura paternal con
¿ la razon se presuma ha domina su propio hijo, con el que habia nacido
o sobre el crímen á que le inducia su
de su propia sangre? Si su imágen es
imaginacion? Ademas la persona au tan familiar á los ojos de sus súbditos
gusta del heredero presuntivo de la estando timbrada sobre la moneda, és
corona debe estar al abrigo del cas— ta les presentaria contínuamente un
tigo: este es el privilegio que debe dis padre cruel é inhumano, y seria mas fa
tinguirle de los demas súbditos. Su miliar todavía porque se entristecerian
dignidad le aproxima tanto á la corona, profundamente todos los corazones.
que debe mirarse como su propio bien. Todas estas razones alegaban los
La soberana justicia que debe dispen teólogos favorables á la causa de don
sar, ¿ha de herir con su espada á aquel Cárlos, para que el rey don Felipe II
que está destinado por la Providencia se contentase y se limitase á poner al
á empuñarla para mantener con ella príncipe en la imposibilidad de ejecu
en paz y en justicia á los pueblos? tar los proyectos criminales que habia
Pueden los jueces ser justiciables y concebido; empero perdonándole , la
castigados, porque no son mas que los pena de los crímenes de que le habian
depositarios de esa espada que el prín juzgado capaz.
cipe, de quien son ministros, ha colo Si esta era la opinion de los teólo
cado en su mano; al confiarles el poder gos favorables al príncipe don Cárlos,
que ejerce la justicia, debe revestirlos otros mas inflexibles ó mas lisonjeros
con la autoridad que ha recibido, con y conocedores del carácter de Feli
el derecho de ejercerla sobre ellos pe II, espusieron contrarias razones,
mismos; empero no puede decirse que manifestando que su crímen no se ha
el príncipe que es la fuente, el orígen bia reducido á un simple conato ó
y el manantial de la justicia se halle proyecto, sino que habia tenido un
sometido á ella: no. d¿. sino de principio de ejecucion; que habia car
Dios de su espada. tas donde se manifestaba enteramen
El heredero presuntivo de la coro te; que todas las medidas de don Cár
na debe tener el mismo privilegio que los se hallaban tomadas para que al
el rey, pues que tiene un derecho in dia siguiente del en que se verificó su
contestable á la corona y que rom prision, pudiese haberse marchado
piendo el velo del porvenir que se toca para ponerse á la cabeza de los rebel
siempre de cerca, el mundo le mira á des; que la ingratitud igualaba á la
la misma altura y sentado en el mismo enormidad de la culpa, pues que iba á
trono. Aqui el heredero presuntivo de hacer la guerra, no solo á la nacion que
la corona es el hijo del rey; el hijo es la ún dia debia gobernar, sino á su rey y
113 CAUSAS CELEBRES.

á su padre, es decir, al que era por Dios mismo sacrificando á su Hijo? Y


doble título su soberano. Que su relbe qué Hijo el Justo por escelencia. Ci
lion debia mirarse cual una enorme taban ademas los teólogos la causa
traicion, y que los designios de críme de los hijos de Bruto, que habiendo
nes de lesa magestad, sus mismos co conspirado contra la libertad de Roma
natos, aun cuando no llegasen á ser y arrestados por el cónsul Publio Va
puestos en ejecucion, eran castigados lerio, fueron juzgados por su mismo
por las leyes. Que no debia mirarse padre, que negándose á los clamores
este conato solo concebido en el alma, del pueblo, que pedia por suficiente
en la que solo habia sobrevivido; y que castigo el destierro de aquellos hijos
no era presumible que la razon lo hu culpables en recompensa de los servi
biera contenido. cios del padre, dictó con rostro infle
Era un proyecto, un designio re xible y con voz segura la sentencia de
flexionado, meditado, que don Cárlos muerte de sus propios hijos, presen
habia comenzado á ejecutar y que hu ciándola él solo sin conmoverse.
biera consumado si no hubiese sido tan Tal fué la contestacion que los teó
fiel el director de correos de Madrid. logos dieron al caso de conciencia pro
Que su dignidad de heredero presun puesto por Felipe II. Al preguntarles
tivo de la corona le constituia en el si conociendo en toda su estension el
primer súbdito del rey, y por conse mal que debia causar en todos sus Es—
cuencia en mayor obligacion de obede tados el perdon del crímen proyectado
cer las leyes que el príncipe imponia á por su hijo, ó su negligencia en casti
los demas súbditos á quienes él debia garle, podia con tranquilidad de con
ser un ejemplo. Aun cuando estuviese ciencia perdonar á aquel hijo criminal
tan próxima de aquella persona la co sin hacerse él mismo responsable ante
rona, no podia gozar de sus prerogati Dios de los males que pudiese traer su
vas ni debian cubrirle las inmunida clemencia; á esta cuestion los teólogos
despropias de los reyes. respondieron con los ojos bañados en
Se hallaba sometido á la espada de lágrimas, trémula la voz, compunjido
la justicia desde que se habia hecho el semblante, manifestando que la
reo. Añadian ademas los teólogos; que salvacion de su pueblo debia serle mu
si el Hijo de Dios, que era la inocencia cho mas querida que la vida de su
misma, porque se habia cargado con propio hijo; que era piadoso perdonar
todos nuestros crímenes fué sometido las faltas; pero que las habia de tal
á la justicia de su Padre ¿cómo don naturaleza que debian ser castigadas sin
Cárlos, realmente culpable, podria sus misericordia con todo el rigor de la
traerse á la del suyo? Si el título de hi justicia.
jo clama por él en el corazon del mo Despues de oir á los teólogos se de
narca, la voz de su crímen debe sofo— cidió por el rigor el rey, que vacila
car aquel poderoso grito. Los deberes ba, no diremos entre la ternura que
de la justicia como del amor que el rey tenia por su hijo, sino en una contí
debe tener por su pueblo, deben pre nua lucha entre el honor del mundo
valecer sobre toda clase de considera que le obligaba á no despojarse del ca
ciones, sobre todos los motivos mun rácter de padre y su política suspicaz
danos. que queria el sacrificio de su hijo. Se
Cuando olvida que es padre de don decidió á dar un ejemplo severo de en
Cárlos, olvida á un hijo indigno que ha tereza y de respeto á la ley. Cualquiera
cesado de serlo; si olvida que es padre que fuese el grado de su cariño pater
de sus súbditos, ¿cuántos mas hijos nal, se inclinaba á seguir el dictámen
olvidará que forman su grandeza y de los que querian que se templase el
constituyen su gloria? Respecto á lo que rigor de la pena á que se habia hecho
se dice de que el oprobio del hijo cu acreedor por sus culpas su hijo; em
brirá la frente del padre, jamás podrá pero su conciencia no le permitia deja
ser cubierta de él cuando su magnani se de cumplir los deberes de sobera
midad le haga inmolar la ternura que no. Cuentan algunos historiadores que
tiene por su hijo á la ternura que tie: entonces el rey firmó la sentencia de
ne por su pueblo. ¿No hemos visto á su hijo; mas esto no es exacto,
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS. 17

No consta que Felipe II hubiese lle drigo de Mendoza con el conde de Ler
gado a firmar, como han pretendido ma, tuvieron por encargo del rey abier
algunos escritores, la sentencia de su ta la puerta de la cámara del príncipe,
hijo. Aunque resuelto á desplegar to y asi pudo ser sorprendido tan callada
da severidad, y dar al mundo un ejem y silenciosamente, que un suceso tan
plo terrible de su justicia, encontró grande pasó sin haberse notado nada en
mas prudente y de igual resultado que palacio, ni haberse sabido aun hasta el
una ejecucion, dejar la resolucion de dia siguiente por los mismos ministros.
tan gravísimo negocio al tiempo, por— El conde de Lerma, don Francisco
que se veia de un modo indudable que Manrique, don Rodrigo Benavides, don
el miscrable estado en que se hallaba Juan ¿ Borja, don Juan Mendoza, es—
el desgraciado don Cárlos, efecto de la taban alternando de dos en dos siem
desesperacion en que le habia puesto pre con el príncipe para hablar con él
la estrechísima prision en que se ha y servirle. Los demas señores de la
llaba, y los escesos que cometia, ora córte no entraban en su cuarto sin un
por aburrimiento, ora por provocar una permiso espreso del rey, y prévio ju
pronta muerte, no podian tardar en ramento, escepto el médico Olivares y
terminar su infeliz existencia. el cirujano cuando habia necesidad.
Hacia cerca de seis meses que don El conde de Lerma se acostalia
Cárlos se hallaba encerrado en el últi siempre en su mismo cuarto y junto á
mo cuarto de sus régias habitaciones, su cama: cuando éste se hallaba malo,
en un cuarto que se flamaba de la Tor ocupaba otro su lugar. Testigo de los
re, porque estaba en una de las torres padecimientos de aquel jóven infeliz á
del palacio, cerradas y clavadas todas quien al nacer prometia el cielo un
las ventanas, y sin recibir la luz mas porvenir tan rico de felicidad y de ven
¿ por unas altas claraboyas. Despi tura, y cuya suerte era entonces tan
ieron toda su servidumbre, en lo que adversa, concibió por su augusto preso
recibió no poca pesadumbre en los pri el de Lerma el vivo interés, el tierno
meros dias. Cuando Ruy Gomez de Sil afecto que en los corazones nobles des
va, el encargado de su prision, le no pierta la desgracia.
tificó esta medida, nada replicó, y solo Tenia el de Lerma y los caballeros
preguntó: ue ya hemos nombrado, encargados
—Y don Rodrigo de Mendoza, mi del triste deber de la custodia del
amigo, ¿tambien me lo quita S. M.? príncipe, la órden de ejecutar cuanto
—Si señor, respondió Ruy Gomez. éste les mandase, escepto el enviar
Entonces le hizo llamar, y echán fuera mensages, recados ó cartas, sin
dole los brazos al cuello, le dijo: un espreso permiso del rey, á quien se
—Don Rodrigo, pésame de no habe daba minuciosamente cuenta de todo,
ros podido mostrar por obra la volun y se le referian los recados antes y en
tad que os tenia y tendré: plegue á tregaban las cartas.
Dios que me halle en disposicion para La órden era que todo el mundo
mostrárosla, como lo haré. pudiese oir lo que se decia en la cá
Y con lágrimas infinitas lo estre mara del príncipe, quien no podia ha
chaba en sus brazos, de los que costó blar al oido ni en secreto, para evitar
no poco arrancarle. Desmayóse al se los inconvenientes que podian causar
¿ del príncipe don Rodrigo de estos misterios. Estaba espresamente
endoza, jóven de gran talento y bellí prohibido contar fuera á nadie lo que
simas prendas, é hijo del duque del el príncipe decia en particular. No ha
Infantado, y que hacia cuatro meses bia en el cuarto del príncipe ni pisto
habia sido nombrado por el rey gentil las, ni espadas: se las quitaban al en
hombre del príncipe, que le habia co trar por respeto, porque el príncipe se
brado un entrañable afecto. hallaba desarmado. Oia todos los dias
El rey, bastaba que fuese querido “desde su cuarto la misa que celebra
del príncipe, para que no le permitiese ban en un altar portátil colocado en
á su lado, y eso que como recordarán medio, capeilanes nombrados por el
muestros lectores, cuando el rey fué á rey para este servicio. Dos gentiles
prenderá su hijo, este mismo don Ro hombres se hallaban siempre á su la
48 CAUSAS CELEBRES.

do, y le acompañaban para recitar las No divisando el dia en que pudiese


horas y el rosario, ó bien hacer la lec obtener su libertad, conociendo dema
tura de algun libro piadoso, segun su siado el carácter de su padre, y no pu
devocion y voluntad. Todos los emplea diendo acostumbrarse á la dura prision
dos y gentiles hombres que le servian, en que se hallaba, cayó en una pro
ademas del juramento general, habian funda melancolía que le redujo poco á
hecho, como ya hemos visto, uno par poco á la última estremidad.
ticular de cumplir fielmente su minis Un dia que su padre habia ido á
terio en el servicio que prestaban al visitarle, y le exhortaba á que tomase
príncipe. algun alimento, comió con tal, esceso
Habia á la puerta de la estancia un que no pudo soportarlo la debilidad de
cierto número de alabarderos, que la su estómago estragado y ya falto del
abrian y cerraban segun las órdenes de calor natural. Esta indigestion le pro
Ruy Gomez de Silva. No se dejaba en dujo una fiebre maligna, vómitos, y la
trar alli á nadie sin advertirlo al mis disenteria, de que el uso continuado
mo Ruy Gomez espresamente, ó al con del agua de nieve habia sido la causa
de de Lerma, si aquel se hallaba ausen principal.
te, ó algunos otros de los altos digna Gran responsabilidad resulta al re
tarios empleados en el servicio de la y á los inmediatamente de
ersona del príncipe. Los tenientes de cuidado del príncipe, cuya salud iban
a guardia española y alemana tenian viendo momento á momento destruir
órden de S.M. de colocar á la puerta se. El doctor Olivares, primer médico
del príncipe diez ó doce alabarderos, yde Felipe II, que ¿ al príncipe
dos á la puerta del príncipe de Eboli, diariamente, notó que el mal de éste
Ruy Gomez de Silva, desde el momen no tenia remedio en la medicina, y
to mismo en que se abria, porque es que la muerte venia precipitadamente
taba encargado personalmente de todo á resolver la grave cuestion que se
cuanto concernia á la guardia y custo agitaba entre el padre y el hijo. Ad
dia del príncipe. virtió á Ruy Gomez de Silva ¿ peligro
Una prision tan estrecha, un trata en que se hallaba el augusto enfermo,
miento tan duro en un jóven tan im y de que era necesario que le anun
presionable cual hemos visto que lo era ciase habia llegado el momento en que
el príncipe don Cárlos, no podia menos debia prepararse á comparecer ante el
de causar una grandísima alteracion en tribunal de Dios, y morir como cris
su cerebro, ya no muy firme desde su tiano. El principe se decidió á recibir
rimera enfermedad en Alcalá, y tam los santos sacramentos de manos de
ien una grande indignacion y cólera su confesor fray Diego de Chaves, y á
al ver que no hallaba medio de salir de pedir perdon al rey.
aquella prision. Asi es que desde los El rey, que en los seis meses habia
primeros dias, sobreescitada su parte pocas veces puesto los pies en la pri
mental, se condujo con la mayor estra sion de su hijo, consultó con sus con
vagancia desórden. La indignacion y sejeros si deberia ir á bendecirle an
la cólera le ponian muchas veces como tes de su muerte; empero los conseje
furioso y fuera de sí. El ardor escesivo ros le manifestaron que su presencia
del verano encendia en sus entrañas podria alterar al príncipe, afectarle á
una especie de fuego ardiente que le él mismo sin provecho ninguno, y su
devoraba; de modo que á cada momen emocion renovar recíprocamente sus
to bebia sin método ni medida agua de dolores, siendo ademas aquella visita
nieve capaz de arruinar el tempera en el estado en que se hallaba el
mento mas robusto. Otras veces pasa príncipe enteramente inútil.
ba noches enteras paseando por la es Sin embargo, agravada ya consi
tancia desnudo y descalzo. Otras trató derablemente la enfermedad del prín
de no comer en muchos dias para pro cipe don Cárlos, cuando éste se halla
curarse la muerte por medio de la ina ba en la agonía, turbado el sentido, y
nicion, habiendo ocasiones en que per perdido el conocimiento, en la noche,
maneció tres dias enteros sin tomar el del 23 al 24 de julio, se presentó Feli
menor alimento, pe II para darle la bendicion á su hijo,
EL PRINCIPE DE ASTURAS DON CARLOS, 9

lo cual hizo colocándose detrás del porque de ella no entendió nunca el


príncipe de Evoli y del prior de San Santo Oficio, sino el tribunal especial
Juan, estendiendo sus brazos por en creado por Felipe II: que el rey, des
tre los hombros de éstos. Retiróse plegando un corazon inflexible firmó
despues el rey inmediatamente con el la sentencia: que rogado por su hijo
dolor pintado en el rostro, y las lá para que le concediese el perdon, y
grimas en los ojos, cual si verdadera recordándole que era su sangre, le ha
mente se destrozase de pena su co bia contestado fria y secamente el
I"dZ0ll. -

monarca, que cuando tenia mala san


A las cuatro de la mañana el 24 de gre hacia que se la sacase el cirujano.
julio, víspera del dia en que la España Refieren tambien que le fueron
celebra desde tiempo inmemorial por presentadas al príncipe varios géneros
su patrono al grande apóstol Santiago, de muerte pintados en un lienzo, para
terminó su vida el príncipe don Cár— que de ellos eligiera el que menos le
los. repugnara, ó el que le pareciese me
Asi acabaron los dias del príncipe nos terrible: que el príncipe se negó
á quien un dia saludaron los pueblos á elegir y que entonces se echó mano
como el heredero de esta inmensa mo— del veneno. Cuentan otros que se hizo
- narquía. No intervino en su muerte ni abrir las venas en un baño caliente:
la cuchilla, ni el veneno, ni el dogal; otros que con un cordon de seda fué
intervino solo la crueldad de su padre estrangulado por cuatro esclavos, los
y el mal trato que sufrió en una estre cuales se le presentaron una mañana en
cha y dura prision por seis meses, que su aposento, y luego tres de ellos le
le ocasionó una terrible enfermedad, sujetaron los pies y las manos, mien
enfermedad que de propósito fué des tras el cuarto le apretaba la garganta.
cuidada por los que tenian un deber Todos estos son cuentos que se han
por la naturaleza y la humanidad de introducido en la historia: lo único
contrariarla y combatirla. Asi es que cierto, lo verdadero es que el príncipe
algunos autores hacen recaer sobre el Cárlos murió de una enfermedad con
rey, sobre el proto-médico Olivares, el traida y descuidada en la prision, el
concierto de haber terminado mas dia 24 de de 1568.
pronto la vida del príncipe propinán El rey Felipe II afectó el mayor
dole una purga inoportuna y nociva, y sentimiento por la muerte de su hijo,
omitiendo atacar el mal por los medios como lo prueban las dos cartas que
que aconsejaba la medicina, entonces. escribió en aquel mismo dia el mar—
Lástima es que la fé de la historia qués de Villafranca y don García de
se halle opoyada sobre dichos de his Toledo, consejero de Estado.
toriadores que se contradicen en los
sucesos mas importantes: de deplorar EL REY.

es la condicion de los hombres por no


poder llegar á abrirse camino la ver Marqués de Villafranca, pariente:
dad sobre la suerte de los mas altos Sábado que se contaron 24 deste mes
personages en el teatro del mundo, y de jullio ántes del dia fué nuestro Se
por consecuencia de los mas visibles á ñor servido de llevar para sí el sere
sus ojos. mísimo príncipe don Cárlos mi muy
Segun la opinion mas verdadera, caro y muy amado hijo, habiendo re
don Cárlos murió en ejecucion de la cibido tres dias ántes los Santos Sa
sentencia que le habia condenado á cramentos con gran devocion. Su fin
un suplicio capital. La ejecucion , de fué tan cristiano v de tan católico
esta sentencia se encomendó al des príncipe que me ha sido de mucho
cuido, á la indolencia, al abandono en consuelo para el dolor y sentimiento
que se dejó la enfermedad del príncipe. que se acostumbra, y de vos como de
Algunos historiadores como Thou, tan fiel vasallo y servidor nuestro se
Pedro Mateo y los italianos Justiniani espera. De Madrid, á 27 de jullio 1568
y Leti, cuentan que la causa de don años.—Yo el Rey.—Por mandado de
Cárlos fué fallada por el tribunal de la Su Magestad.—Francisco de Erasso.—
Inquisicion, lo cual es un nuevo error, Con rúbrica.
120 CAUSAS CELEBltES.

En el sobre.—Por el Rey—Al durante los seis meses en la guarda y


marqués de Villafranca, su pariente. custodia del príncipe de Asturias. Con
cedió una encomienda de Calatrava al
EL REY. conde de Lerma, y lo hizo gentil hom
bre de cámara de su cuarto. Por estas
Don García de Toledo del nuestro acciones quiso imponer y hacer olvidar
Consejo destado: habiendo sido Dios el odio político que le habia obligado á
servido llevar para sí al serenísimo inmolar á su hiio.
príncipe don Cárlos, mi muy caro y Para cubrir de algun modo el horror
muy amado hijo, podreis bien consi que inspiraba aquella muerte en la cór
derar el dolor y pena conque queda te, y acallar las conversaciones que en
mos. Fué su fallecimiento á los 24voz baja se hacian entre sí sobre aquel
deste, habiendo con gran devocion suceso que tanto habia alarmado á la
recibido tres dias ántes todos los sa monarquía española en toda la esten
cramentos, y hecho fin tan cristiano y sion de su reino, trató de hacer á la
con tanto conocimiento y contriccion memoria de su hijo los funerales mas
que nos ha sido muy gran consuelo y ostentosos que hasta entonces se ha
alivio para este trabajo, y esperamos bian visto. Mandó á todas las ciudades
en Dios le habrá llevado para que go y villas que se celebrasen régios fune
ce dél perpétuamente, y que nos dará rales y se hiciesen grandes sufragios
su fabor y ayuda para que nos con por el descanso del alma del príncipe de
formemos con su divina voluntad; de Asturias, muerto en la flor de su edad
que os habemos querido avisar como por una muerte imprevista, que habia
es razon, siendo como somos ciertos afligido estremadamente á S. M. C. In
que nos ¿ á llevar este traba digna hipocresía, comparable solo á la
jo. De Madrid á 29 de jullio 1568.—Yo que practicó Cárlos V cuando hacia ha
el Rey.—Antonio Perez.—Con rú cer procesiones en España para obte
brica. ner la libertad del papa Clemente VIII,
En el sobre.—Por el Rey.—A don que tenia prisionero en Roma por los
García de Toledo del su Consejo des ejércitos mandados por sus generales.
tado. Felipe II, al imponer á toda la nacion
las apariencias de un fastuoso dolor,
El conde de Lerma, que en el pe guardaba para dentro de sí en lo mas
noso y duro encargo de haber custo interior de su corazon la satisfaccion
diado durante seis meses al príncipe que sentia al verse libre de su hijo,
don Cárlos, habia manifestado á la par que miraba como su mas grande ene
que al rey toda su fidelidad, toda la migo, y que podia haber causado mas
consideracion y deferencia que mere de un conflicto á su corona.
cia el infortunio y la alta clase á que El cuerpo del príncipe don Cárlos
rtenecia el desventurado que sufria, fué conducido para ser enterrado en el
¿ concluido por tener un verdade convento de monjas de Santo Domingo
ro amor á aquel desventurado príncipe. el Real de Madrid, donde permaneció
Asi es que su muerte le causó el ma hasta el año de 1573, en que fué tras
yor dolor, y aparecia inconsolable á los portado al monasterio de San Lorenzo
ojos de la córte por la pérdida de aquel del Escorial, no obstante que el testa
jóven. mento que tenia , otorgado al año si
Felipe II, para quien aquellos pesa guiente de su enfermedad en Alcalá,
res eran una verdadera reconvencion, prevenia que se depositase en el con
Felipe II, que á pesar de que nadie en vento de San Juan de los Reyes de To
su reino se atrevia á levantar la voz y ledo.
echarle en cara la muerte de su hijo, Magnífica fué la comitiva que asis
tenia dentro de sí, como implacable tió á la pompa fúnebre. Alli fueron to
acusador, su turbada conciencia, to dos los Consejos y grandes de la na
mó un medio para hacer cesar en par cion: el nuncio del papa caminaba en
te el sentimiento del conde de Lerma. medio de los obispos de Cuenca y de
Recompensó con mano generosa á to Pamplona, presidiendo el cardenal Es
dos los criados que habian intervenido pinosa entre los archiduques Rodulfo y
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS. 121

Ernesto, hijos de Maximiliano II y so— un padre penetrado de dolor por la


brinos del rey. Los archiduques cedian muerte de su hijo. ¿Quién sino los ini
su puesto de honor al cardenal Espi ciados íntimamente en las cosas de la
nosa, ante quien se inclinaba toda la córte podria suponer que hubiese sido
España, y que habia sido uno de los el instrumento de su pérdida?
mas terribles enemigos del desgracia Asi terminó su vida el décimo
do príncipe don Cárlos, desde que, co quinto príncipe de Asturias, don Cár
mo hemos referido, se vió amenazado los de Austria. -

con un puñal por él, á causa de haber La causa de su muerte fué verda
se negado á levantar el destierro al deramente política y tomada para evi
cómico Cisneros. tar el que verificando su proyecto, ó
Felipe II manifestó una estóica y animando á los rebeldes de Flandes,
fria tranquilidad el dia, de esa pompa pudiesen separarse aquellas provin
fúnebre, cuando mirando desde uno de cias de la monarquía española.
los balcones de su palacio la disposi Asi es que Felipe II, que no per
cion de la marcha de la comitiva, deci donó ni á su hijo primogénito, desple
dió en el acto una dificultad que sobre gó una crueldad inmensa en los Paises
vino sobre el sitio que debian ocupar Bajos por medio de su teniente el du
los diferentes Consejos del Estado que que de Alba. Este, bajo el pretesto
asistian. Al llegar cerca de la puerta de una conferencia, invita á los con
del templo, el cardenal Espinosa se re des de Egmont y de Horns a ir á su
tiró inmediatamente, bajo el pretesto palacio, y alli son presos y conducidos
de un fuerte dolor de cabeza; pero co á la fortaleza de Gante.
mo era conocido por el mas peligroso y Felipe II habia preso al baron de
mas irreconciliable enemigo del prín Montigny que había venido de Flan
cipe don Cárlos, se oyó murmurar á des, y secretamente lo hizo ahorcar en
muchos, aunque en voz baja, que era Simancas.
porque no habia podido sufrir la pre La duquesa de Parma, gobernadora
sencia del príncipe ni muerto ni vivo. de los Paises Bajos, desaprueba aque
La primer cosa que se descubrió en llas medidas arbitrarias, y deja un
el pórtico de la iglesia, fué aquel elogio gobierno en que se herian sus senti
célebre de la Escritura para un muer mientos, y se insultaba su dignidad.
to, escrito en grandes caractéres de El duque de Alba quedó solo, y
oro sobre la puerta por donde se en continuó desplegando de una manera
traba. atroz sus , persecuciones. Los protes—
tantes y los católicos , se perseguian
Nos ha sido arrebatado de miedo mútuamente. Cada ciudad era un cam
de que la malicia del siglo no cambiase po de batalla que se regaba con la
su corazon, y de que la lisonja no sedu sangre de los unos y de los otros.
jese su espiritu. - -
as órdenes de Felipe II eran cada
A la memoria de don Cárlos, princi vez mas severas. Despues de la muer
pe de las Españas, de las Dos Sicilias, te del príncipe don Cárlos, los condes
de las Galias Bélgica y Cisalpina, here de Egmont y de Horns fueron sacados
dero del Nuevo Mundo; incomparable de la fortaleza de Gante, y ajusticia
en grandeza de alma, en liberalidad y dos en la plaza pública de Bruselas.
en amor á la verdad. En vano la condesa de Egmont implo—
ró de Felipe II el perdon, recordándo
Asi sufrió Felipe II, que se pre le que al valor de su marido se debia
sentase cual un héroe á la vista la gloria de San Quintin y de Graveli
del pueblo al príncipe á quien habia nas. Ni las lágrimas, ni los ruegos, ni
condenado de hecho á sufrir la muerte el recuerdo de las victorias conmovie—
como un rebelde. Poco le importaba al ron su corazon. Ya desde entonces la
padre que se borrase el oprobio del crí insurreccion se hizo general: el prín
men que le habia imputado: habia cipe de Orange abjuró públicamente
muerto, y de los muertos nada hay que el catolicismo, y declaró que su objeto
temer. Engañaba asi al público, y le era salvar el pais. Desde aquel mo
ocultaba su crueldad bajo el esterior de mento comenzó ": lucha terrible,
122 CAUSAS CELEBRES.
=

cuyo fin debia ser tan desastroso para Lorenzo el 24 de agosto de 1597, ante
la España. el secretario Gerónimo Gasol, al tenor
Tres meses despues, el 3 de octubre de la cláusula siguiente, que es la 14."
de 1568, murió tambien la reina Isabel; «I porque es justo poner cobro en
y esta circunstancia ha dado márgen muchos papeles que yo queria poder
á corroborar la idea de los que han reconocer, si mis indisposiciones y
supuesto unos amores entre el desgra ocupaciones dieren lugar, mando y es
ciado príncipe don Cárlos y su ma— mi voluntad que sino lo hubieren he
drastra, destinada antes á ser su es— cho en vida, fallecido que yo haya, se
posa. Empero están desvanecidas es— entreguen á don Cristóbal de Mora,
tas sospechas, sin mas que considerar conde de Castel-Rodrigo, todas las lla
la causa de la muerte de esta jóven ves que yo tengo, asi maestras y do
princesa, la que habiendo quedado des bles como de escritorio; las primeras
de 1567 sumamente debilitada del par para que las dé al príncipe mi hijo, (al
to, en que dió á luz su segunda hija, y príncipe don Felipe) á su tiempo, y
habiéndose hecho nuevamente emba haga de ellas lo que mandare, y las de
razada, padecia todos los meses tales los escritorios para que el mismo don
desmayos y ahogos que desde luego Cristóbal y don Juan de Idiaquez se
opinaron los médicos porque era im junten con fray Diego de Yepes, mi
posible que pudiese vivir. Asi es que confesor, con la mayor brevedad que
el 3 de octubre, despues de un traba— fuere posible, y que hallándose pre
joso aborto de una niña de cuatro me sente Juan Ruiz de Velasco, que les
ses y medio, dejó de existir, dejando podra advertir donde están algunos
en el mayor desconsuelo su muerte papeles, abran y vean los tres todos
los ánimos de todos, porque era una los escritorios que yo tengo y se halla
reina que se habia adquirido con sus ren, asi en el lugar donde fuere mi fa
gracias y virtudes las simpatías de llecimiento, como en la villa de Ma
cuantos la conocian, y de los pueblos drid, si fuera de ella sucediese; y quie
españoles. ro que todos los papeles abiertos ó
-

Por una coincidencia particular, Fe cerrados que se hallaren de fray Diego


lipe II, dos años despues contrajo ma de Chaves, difunto, que fué mi confe
trimonio con la princesa Ana de Aus sor, como se sabe, escritos de él para
tria, la que estuvo tambien destinada mí, ó mios para él, se quemen desde
para ser la esposa del príncipe don luego en su presencia, habiendo reco
Cárlos, y á cuyo matrimonio hemos vis nocido primero, sin leerlos, si entre
to las contínuas dilaciones que oponia ellos habrá algun breve ú otro papel de
Felipe II, fundándose en el mal estado importancia que convenga guardar, el
de su salud. Asi este rey se casó dos cual se apartará en tal caso, y otros
veces con las esposas destinadas á su papeles de cualesquier que tratasen de
hijo. cosas y negocios pasados que no sean
Hemos referido cuanto de mas se ya menester, especialmente de defun
guro y cierto consta sobre la muerte tos, y cartas cerradas, se quemarán
del príncipe don Cárlos; esa muerte tambien alli en presencia de los mis
lll OS.))
contada de tan diversos modos y con
tan diferentes episodios, y atribuida á
tan distintas causas por los diversos
historiadores que se han ocupado de
ella.
Nosotros no hemos podido consul— Con gran rigor fué tratado el prín
lar la causa original, la que sin duda, cipe don Cárlos por la sagaz política de
como dice el laborioso don Modesto La su padre. Si bien, como habrán visto
fuente, que ha estado muchos años re nuestros lectores, hubo motivos lega
corriendo el archivo de Simancas para les, morales y políticos para poder de
buscar documentos con que escribir su terminar su reclusion y arresto, tal vez
magnífica historia de España, debió ser para intentarle un proceso, no lo hubo
de los papeles que Felipe II mandó se nunca para llevar tan adelante las co
SdS.
quemasen en un codicilo hecho en San
EL PRINCIPE DE ASTURIAS DON CARLOS. 423

Pudieran muy bien aquellos proce españoles han mirado siempre con in
dimientos haber servido de base para terés á los príncipes desgraciados, como
una declaracion en que fuese escluido sucedió en esta ocasion, y como tres
de la sucesion á la corona; empero sin siglos despues iba á mostrarlo de un
duda el rey Felipe II tendria presente modo poderoso y patente en favor de
el ejemplo del príncipe don Cárlos de otro príncipe de Asturias (Fernan
Viana, á quien no bastaron los proce do VII), con quien en nuestro siglo
sos para privarle del derecho que te— parodiarse el escandaloso suceso
nia á la corona de Navarra, y á quien e Felipe II.
en dos ocasiones distintas, cuando se Es indudable que el príncipe don
hallaba preso, los pueblos trataron de Cárlos llevaba una conducta desarre
libertarle; y mas tarde, y despues de que su genio irascible y sober
reconciliado con su padre, cuando vol io le hacia incapaz de reinar, pero co
vió á hallarse preso en la Aljafería de mo dice perfectamente el sabio histo
Zaragoza, tuvo su padre que ponerle en riador Lafuente, si esto pudo atraerle
libertad, reconocerle por su heredero, el despecho, el enojo y la antipatía de
devolverle el condado de Barcelona. su padre, no parece ser esta la causa
Era Felipe II de los hombres que creen inmediata de su reclusion. «Esta mi
que los odios profundos no deben dar— determinacion, decia el rey en las car
se á guardar á la prision mas estrecha, tas que han visto nuestros lectores,
sino al sepulcro, que jamás devuelve no depende de culpa, ni inobediencia,
las personas que una vez han sido co ni desacato, ni es enderezada á casti
locadas en él. go, que aunque para esto habia sufi
A pesar del gran dominio que ejer ciente materia, podia tener su tiempo
cia ¿ toda la nacion, no podia ocul y su término.» Es indudable que Feli
társele que el infortunio de su hijo ha pe II no obró como padre ofendido, sino
bia escitado grandes simpatías, porque como príncipe agraviado.
aunque callada y silenciosamente, se Es indudable para nosotros qu
hablaba y se murmuraba en su reino existió el conato, y que no le realizó
del rigor con que procedia. El pontífi por la falta de medios, y por la opor
ce supremo de la Iglesia, el emperador tuna denuncia que hizo rey Feli
de Alemania, los reyes estrangeros, la pe II el director de correos Tasis, de
reina misma doña Isabel, y la princesa la marcha clandestina á los Paises Ba
doña Juana, todos sin cesar le pedian é. jos del príncipe don Cárlos. Como en
instaban por el príncipe don Cárlos; aquellos paises, al par de la subleva
prueba evidente del interés qne susci cion contra la dominacion de Feli
taba su desgracia en todos los ánimos, pe II, la guerra tenia un carácter reli
en todos los corazones. gioso, Felipe II vió en la intentona de su
El rey don Felipe se mostró sordo hijo una causa religiosa y política á la
á los clamores tan distintos que por vez. Asi es que en una de las cartas
todas partes llegaban á él pidiendo in habrán notado nuestros lectores estas
dulgencia y piedad para su hijo. La espresiones: «Tiene este negocio otro
muerte de don Cárlos estaba decidida principio y raiz, y que es, de mayor
en su corazon; era una parte del plan importancia y consideracion para sa
suyo que con tanto celo seguia el du tisfacer yo á la dicha obligacion que
que de Alba en los Paises Bajos, y que tengo á Dios y á mis reinos.»
él mismo completó despues de la muer La prision de los nobles flamencos,
te del príncipe don Cárlos, haciendo que con el noble baron de Montigny
ahorcar secretamente en Simancas al habian venido á España y que habian
baron de Montigny y á otros de los que encontrado tan favorable acogida en el
habian venido de los Paises Bajos para ánimo del príncipe don Cárlos, prueba
esponer las quejas y los agravios de esto mismo.
aquellos naturales, y que se habian El odio que el príncipe don Cárlos
ranjeado el afecto del príncipe don hemos visto profesaba al duque de
árlos. Alba, cuyas medidas altamente mote
Don Cárlos tenia partidarios, entre jaba declarándose en favor de los he
otras causas porque era príncipe, y los reges flamencos sin considerar el ca
124 CAUSAS CELEBRES.

rácter intolerante de su padre, cons º que podia resultarle de


tituyen tambien un delito que él no aber entregado á la cuchilla de la
podia perdonar. Felipe II, habia es ley la cabeza de su hijo. Se valió del
presado públicamente, segun refieren medio indigno de que en una enfer
todos los historiadores, en un auto de medad cruel que le sobrevino durante
fé en Valladolid, que si él supiera que el curso de la causa, en lugar de su
su hijo se hallaba contaminado con la ministrarle los remedios que exigia la
heregía él mismo seria capaz de llevar humanidad y que jamás se han nega
la leña á la hoguera para que fuese do ni aun al reo á quien se destina al
uemado. Es ¿ pues, funda cadalso, pues se le auxilia hasta el úl
o en estos motivos V en el conoci— timo momento con todos los recursos
miento del carácter de Felipe II, que del arte, se valió, repetimos, del pro
una de las causas principales de la to-médico Olivares, dejando seguir
prision del príncipe don Cárlos fué la adelante el curso de esta perniciosa
persuasion en que aquel se hallaba de enfermedad , y aun dándole remedios
que su hijo no solo atentaba á su coro contraindicados como aseguran otros
na procurando desmembrar de ella autores, á consecuencia de lo cual su—
uno de sus mas importantes reinos, cumbió prematuramente.
sino que trataba de favorecer la re Por último en los momentos de la
forma y la heregía de Lutero. agonía, á pretesto de no perturbar sus
De cualquier modo que sea, por últimos momentos, colocado detrás de
mucho que algunos historiadores ha— los magnates que le habian servido de
yan querido justificar la conducta de carceleros en la estrechísima prision,
Felipe II y aun ensalzando el heróico le da Felipe II una bendicion que bien
sacrificio que contaba hacer de su pro podia ser un sarcasmo cruel en un
pia sangre, segun las espresiones del hombre que tan preciado de religioso
mismo rey tratando de repetir el y de buen cristiano, dejaba sin embar—
ejemplo de Abrahan, no puede hallar go perecer asi al hijo que le habia con
disculpa á los ojos de la humanidad la cedido el cielo, y que habian saludado
manera , tan indigna con que logró con tanto entusiasmo los pueblos de
llevar adelante sus propósitos. No tu Castilla veinte y tres años antes com o
vo la franqueza de arrostrar á los ojos el príncipe heredero de su corona.
de su siglo y de la posteridad la res

- = x3.229 2232z=—
ANTONIO PEREZ.

MINISTRO DE FELIPE II.

(1578.—1501.)

Eran las once de la noche del dia 28 cumplido sus órdenes, tornó á palacio,
de julio de 1579, y permanecia silen donde pasó la noche inquieto y medi
ciosa la capital de la monarquía espa tabundo sin haberse recogido; y muy
ñola, cuando un hombre de aspecto de mañana escribió al duque del Infan
sombrío y grave, acompañado de otro tado, pariente de la princesa, y al du
mas jóven, se hallaba oculto y embo que de Medina Sidonia, su yerno, esta
zado en su capa, á pesar de lo caloro Carta.
so de la estacion, en el pórtico de la
iglesia parroquial de Santa María, in— Duque primo: Ya avreis entendido
móvil cual una sombra, y mirando con que entre Antonio Perez y Matheo Vaz
mucha atencion á la casa donde hoy uez, mis secretarios, ha avido algunas
están situados los Consejos. ifferencias y poca conformidad, in
Aquel hombre rodeado de tanto terponiendo en ellas autoridad de la
misterio era Felipe II, el rey de Espa princesa de Eboly: con la cual he te
ña, acompañado de su ayuda de cáma nido la cuenta que es razon, assi por
ra don Sebastian de Santoyo, que iba los deudos que tiene, como por haver
á presenciar por sí mismo la prision de sido muger de Ruy Gomez, que tanto
la princesa de Eboli, la viuda de su me sirvió y á quien tuve la voluntad
gran privado Ruy Gomez de Silva. que sabeis. Y aviendo querido enten
Presenció, en efecto, desde alli có— der la causa desto, para tratar del re
mo el alcalde de córte Alvaro García medio, y porque se hiciesse con el si
de Toledo sacó á aquella deshora de la lencio que convenia, y por la satisfac
noche de su casa á la mencionada se— cion que tengo de la persona de fray
ñora, tan preciada y notable en la cór— Diego de Chaves, my confesor, le or
te, y la condujo despues á la fortaleza dené que hablasse de mi parte á la
de Pinto. Momentos antes el mismo al princesa y entendiese la queja que te
calde habia preso en su casa de la pla nia del dicho Matheo Vazquez y en lo
za del Cordon, casa perteneciente al que la fundaba, como lo hizo, y habló
conde de Puñonrostro, á Antonio Pe— para comprobacion de ello á otras per
rez, el ministro favorito de Felipe II, sonas qué ella le nombró, y no hallan
á quien llevó arrestado consigo á su do el fundamento que convenia, pro
propia casa. curó con ella, siguiendo la comision
Cerciorado el rey de que se habian que yo le dy, de atajarlo para que ces
426 CAUSAS CELEBRES.

sase y mo pasase adelante, y que los prision siguiese manejando los gran
dichos Antonio Perez y Matheo Vaz des negocios de estado que se agita
quez se tratassen y fuesen amigos, assy ban entonces en la ¿ españo
por lo que convenia á mi servicio, co— la, la cual representaba á la sazon tan
mo á todos ellos. Y entendiendo yo principal papel en toda Europa.
¿ la princesa lo impedia, le habló Antonio Perez, ministro de Fcli
icho mi confessor algunas veces para pe II, y favorito suyo, tal cual podia
que encaminase de su parte lo que yo tenerlos aquel monarca suspicaz y re
tan justamente deseaba. Y viendo que celoso, ejerció la mayor autoridad en
mo solamente no aprovechava, pero que los negocios mas complicados de Euro
el término y libertad con que a proce pa, y muy particularmente en ciertos
dido es de manera que por ello y su reservados de estado. No solo fué pri
bien he sido forzado mandarla llevar y vado del rey cuando se hallaba libre,
recoger esta noche á la fortaleza de la sino que continuó siendo su ministro
villa de Pinto. De lo cual por ser vos los once años y medio que estuvo en
tan su deudo, he querido avisaros co prision mas ó menos estrecha, creyen
mo es razon, para que lo tengays en do todos que podria recobrar su liber
tendido: que nadie desea mas su quie tad un dia y no sabiendo á qué atri
tud y govierno y acrescentamiento de buir aquel proceder tan singular del
su casa y colocacion de sus hijos.—En r (º V.
Madrid, á 29 de julio de 1579.—Yo Antonio Perez era hombre de genio,
EL REY. de política sagaz, pero inmoral, de
condicion perversa. Cuando se persua
Diez años y medio hacia que tam dió de que nada tenia que esperar de
bien en el silencio de la noche se ha Felipe II, de quien poseia todos los se
bia verificado la prision del príncipe cretos, huyó áAragon, desde alli al es
don Cárlos, el heredero de la monar— trangero, vendió los secretos de su pa
quía, decretada por su padre, y no se tria, y fué causa de la pérdida de las li
sabe cuál prision de estos dos perso— bertades de aquel pais, que habian sido
nages fué la que causó mayor sensa su escudo y salvaguardia, y pudo mas
cion en España; porque en ambas pri en su corazon egoista el deseo de sal
siones se nota el velo del misterio, la var su vida, que el de darla gloriosa
vaguedad, la indecision en el obrar, mente en defensa de los fueros que él
presentando ambas causas continua habia comprometido, ó bien resignar
das y variadas peripecias. se á perecer en el cadalso con el gran
El motivo ostensible de la prision justicia de Aragon Lanuza, y demas
de Antonio Perez, que en cuanto se su nobles caballeros que por su causa se
o al dia siguiente llenó de estupor á habian levantado. -

a capital de la monarquía, fué objeto Antonio Perez tuvo la suerte de to


de grandes comentarios, no solo en las dos los favoritos del mundo. Mientras
provincias de España, sino en los di permaneció al frente de la administra
versos reinos que tenia Felipe II some cion del estado, á él se dirigian todas
tidos á su dominio, porque se dijo que las acusaciones; contra él levantaba su
fué la oposicion constante en que se voz el pueblo, del modo que podia le
hallaban dos ministros del monarca, vantarse en tiempo de Felipe II, y con
Mateo Vazquez y Antonio Perez. Esta tantos motivos como habia para poder
es la causa que se alegó por la justicia, acusarle de inmoralidad, se exageraban
pero es causa de suyo harto liviana pa todavía mas estos motivos, inventando
ra producir la prision de dos personas otros nuevos. La multitud de descon
tan altamente colocadas. tentos, los que no salian airosos en sus
La causa formada contra Antonio pretensiones, el tropel de ambiciosos
Perez es un escándalo tan grande, que que circunda siempre los tronos, de
no tiene ejemplo en los fastos judicia seando arrancar importunos, una par
les del mundo. Por ella se redujo á te del poder, y despues de todo esto la
prision á un ministro favorito del rey, envidia cortesana, le hicieron el blan
â se le tuvo encerrado once años, dán co de sus envenenados tiros.
ose el espectáculo de que desde la Cuando á aquel mismo hombre con
ANTONIO PEREZ. 127
=

tra quien se dirigian las acusaciones sibles sus planes y que ha hecho ocu
del pueblo y el odio de los grandes parse tanto para penetrarle á sus con
que ¿ humillado con su orgullo, le temporáneos como á los siglos poste
vieron caido, proscripto y desgraciado, riores. Monarca de la primera potencia
cuando la fortuna adversa acumuló so del mundo en aquella época, estiende
bre su cabeza todas las calamidades, á diversos reinos su actividad prodi
que fueron un ejemplo terrible á su giosa y enérgica, y los mantiene todos
siglo, y que le hicieron decir á él mis bajo su dominio con tal severidad y
mo que era el espectáculo, el monstruo reserva, que le hacia tan temible como
de la fortuna luchando con la naturale respetable.
za, entonces desaparecieron á la vista Todo lo subordinaba á su plan de
del pueblo los defectos, las concusio— gobierno. Consagraba casi todo su tiem
nes del insolente favorito, y solo se vió po al despacho de los negocios, y es
la víctima de la desgracia, y el juguete admirable el número de resoluciones
del capricho y de la venganza de su rey. que se encuentran escritas de su puño
La posteridad juzgó asi á don Al y letra al márgen de las consultas que
varo de Luna, de quien hemos hablado le dirigian los diversos gobiernos de
á nuestros lectores, de quien conspi sus estados. Jamás confió á nadie el
rando todos los grandes para hacer caer cuidado de leerle estas consultas; él
su cabeza cuando se hallaba erguida al mismo las examinaba detenidamente,
lado del trono de Juan II, lloraron des y al márgen de cada asunto de ellas,
pues al verla rodar sobre el cadalso de anotaba su resolucion ó las adverten
Walladolid. No ve la posteridad en el cias que tenia que hacer, contestando
poderoso condestable sino sus altas párrafo por párrafo.
dº su noble valor, y la historia De carácter frio, son pocas las ve
ha convertido en arco triunfal los ces que ha dejado traspirar en la his
escalones de su cadalso. toria de su vida las pasiones fogosas
Asi tambien la posteridad ha con que en su juventud, y aun mas en su
templado á Antonio Perez objeto del edad madura, alteraron su corazon. A
odio del pueblo, mientras conserva la una de estas pasiones hay que atribuir
influencia de Felipe II; ídolo de aquel la causa de la prision y proceso de An
mismo pueblo cuando se le pone fren tonio Perez y de la princesa de Eboli,
te á frente, y cuando separándose del como hubo que atribuir tambien á su
monarca invoca los fueros y las liber deseo de conservar ilesa la unidad de
tades de Aragon para salvar su vida, su reino, la causa de que hemos habla
fueros y libertades que encontraron su do anteriormente á nuestros lectores,
ruina y destruccion en el proceso de la causa del príncipe don Cárlos.
que vamos á hablar. No entra en los límites de la nar
La misteriosa córte de Felipe II es racion de un proceso célebre el formar
el teatro de esta gran causa, de este la historia de Felipe II, que con mano
¿ célebre por el resultado terri maestra han trazado ya los escritores
le que trajo á Aragon y por las gran modernos, separándose de las vulgari
des peripecias y episodios á que dió dades con que procuraron infamarle
lugar durante el largo período de su sus enemigos ó de las escesivas ala
duracion de once años y medio. Nos— banzas que le ha tributado el clero. El
otros creemos deber presentar á la vis célebre Prescott ha trazado su vida, y
ta de nuestros lectores, dibujados á nuestro compatriota el general San Mi
grandes rasgos, las personas que son guel, aunque mirándole bajo el prisma
los principales actores de este drama de las opiniones altamente liberales
terrible que tuvo por víctima las liber que le han distinguido toda su vida,
tades y fueros de un gran pueblo. nos ha dejado tambien un cuadro de
No necesitamos volver á retratar á este gran monarca. Las ligeras reflexio
Felipe II; es una figura colosal que apa nes que al hablar de la causa del prín
rece en la historia del siglo XVI tan di cipe don Cárlos hemos espuesto, cree
versamente juzgada por la posteridad, mos que bastarán para dar á nuestros
empero que se presenta siempre vela lectores la idea necesaria del carácter
da de un misterio que hace incompren de Felipe II, y harán que no vean con
128 CAUSAS CELEBlkES.
-

estrañeza el curso variado que sigue la todavía á viajar por la Europa, dándo
causa de Antonio Perez. le cartas de recomendacion para los
Antonio Perez nació en Monreal de diversos gobernadores que mandaban
Ariza, en el reino de Aragon, circuns los estados que poseia la España, y
tancia sumamente importante porque para los ministros de los reyes estran
es la que le da un colorido particular, geros.
y la que fué causa del resultado de los Habia Antonio Perez nacido con
rincipales y mas interesantes episo grandes disposiciones; era un hombre
¿ de este proceso. Fué su padre Gon destinado á hacer un gran papel sobre
la escena del mundo, y asi es que des
zalo Perez, secretario único de Estado,
que sirvió cuarenta años con grande de muy niño comenzó á tratar con los
honor al emperador Cárlos V, y des hombres mas eminentes de su siglo, y
es de la abdicacion de éste, á su jóven aplicado, , deseoso de adquirir
ijo Felipe II. Algunas versiones hay instruccion, se dedicó al estudio de la
que suponen que el padre de Antonio administracion, la política y de los re
Perez no fué el honrado secretario del cursos de las naciones que recorrió.
emperador y del rey, sino el poderoso Bajo el esterior de un jóven con la ale
magnate Ruy Gomez de Silva, príncipe gría, la viveza, y aun el atolondra
de Eboli, que á imitacion de su señor, miento de su edad, ocultaba una saga
hizo criar á su hijo natural por Gonza cidad penetrante y una ambicion des
lo Perez, dándole una educacion bri enfrenada. De una memoria prodigio—
llante, como el emperador habia hecho sa, conservaba cuanto pasaba por ella,
con don Juan de Austria. Punto es es— cuanto adquiria con su mucha lectura.
te que no vemos bastante aclarado en Aficionado á la literatura, Ovidio y Ho
la historia, mas ora fuese Gonzalo Pe racio forman sus entretenimientos, y
rez el padre verdadero de Antonio, ó Tácito, ese severo historiador, y Ma
fuese el ayo y tutor, como el señor de quiavelo, el político profundo de Flo
Villagarcía, don Luis Quijada, lo era rencia, constituyen sus delicias. En
de don Juan de Austria, es lo cierto tregado á los placeres durante el dia,
que le miró con el amor de hijo, y que emplea la noche, que debia dedicar al
trató de darle y dejarle por principal descanso, á un contínuo y asíduo es
atrimonio una instruccion sólida y tudio.
¿ Llegó á conocer el mundo, llegó á
La honradez de Gonzalo Perez le apreciarlo en lo que valia; sentia en su
hizo mantenerse en el difícil puesto de corazon arder la llama de la ambicion,
ministro de Estado en dos reinados cu sin temer los peligros á que espone
yos monarcas tenian un carácter tan a fortuna de los hombres, sin asustar
diferente; pero si bien le salvó su hon le los palacios de los reyes, se lanza á
radez de las intrigas palaciegas, cono conquistarla creyendo que podria do
cedor de la córte, trató de dirigir á su minar la suerte, la suerte que le re
hijo por una senda en la que pudiese servaba para ser uno de los mas ter
evitar los escollos de que se hallan eri ribles ejemplos de su veleidad é in
zados los palacios de los reyes. constancia.
Hizo Antonio Perez sus primeros Habia pasado su juventud en las
estudios en la universidad de Alcalá córtes de la Italia y en Roma, y alli ha
de Henares, en esa célebre creacion bia respirado y empapádose en el amor
del inmortal cardenal Jimenez de Cis á las artes, pero tambien habia adqui
meros, que se hallaba entonces en el rido la aficion al lujo y á la vida de los
apogeo de su brillo y de su esplen placeres, tan distinta de la que se ha
dor; universidad donde se reunian los cia en la austera córte de Felipe II.
hombres mas célebres de la España, Durante sus viages habia quedado
empero que por la circunstancia de huérfano Antonio Perez. Volvióá su pa
la época limitaba su instruccion únicatria lleno de deudas por la vida disi
mente á las ciencias sagradas y á la pada que habia hecho, pero tambien
jurisprudencia. Queria Gonzalo que su lleno de instruccion y de conocimien
hijo ensanchase mas la esfera de sus tos superiores á los que tenian los
conocimientos, y le mandó muy jóven hombres que ocupaban altos puestos
ANTONIO PER.Z, 420

en la córte del rey de las Españas. del trono, y en medio del zumbido y
Si bien habia perdido á su padre du la ambicion celosa de los cortesanos,
rante sus viages, vivia todavía su pro su voz es tan alta y tan poderosa en el
tector Ruy Gomez de Silva, el prín corazon del monarca que los acalla á
cipe de Eboli, el hombre que le miraba todos, y sus méritos alejan á todos sus
con tanto afecto y con tanto cariño, enemigos y rivales.
causa de que algunos historiadores le Perez penetró los misterios de la
supusiesen su verdadero padre. córte, penetró el corazon del rey, y has
Nuestros lectores han visto al ha ta una de aquellas pasiones qué su ca
blar de la causa del príncipe don Cár rácter severo y austero comprimia en
los, que el príncipe de Eboli era uno el último pliegue de él, le fué revelada
de los primeros personaces de la córte por su soberano. Fué Antonio Perez,
y que á él fué encomendada la guardia pues, confidente de los amores del rey
y custodia del príncipe don Cárlos lu Felipe II. El rey amaba á la princesa de
rante su prision. Ruy Gomez de Silva Eboli doña Ana de Mendoza.
con el caracter flexible, que es el único Doña Ana de Mendoza y de la Cer
talento de los cortesanos, habia logrado da, hija única de los coñdes de Me
atraerse el afecto de Felipe II, á lo que lito, brillaba por su hermosura y sus
se añadia la pasion que este príncipe gracias en la córte de Felipe II.
profesó siempre á su esposa doña Ana Habia ya conmovido el corazon del
de Mendoza. sombrío Felipe aun antes de que éste
Asi, á su vuelta Ruy Gomez pre se ciñese la corona de ambos mundos;
sentó al rey á Antonio Perez como el asi es que siendo todavía príncipe, es
hijo de su antiguo secretario, ponderó Felipe el que arregla la boda con el
de tal modo sus particulares talentos anciano Ruy Gomez de Silva, duque de
y apreciables dotes, que el monarca Pastrana, príncipe de Eboli, con quien
deseó conocerle. se casa doña Ana á pesar de su corta
Presentado pues Perez por el prín edad, pues solo contaba trece años. Fe
cipe de Eboli á Felipe II, contestó con lipe II asiste en persona á la boda, y ha
tal precision, con tal soltura á las mu ce merced á Ruy Gomez de seis mil du
chas preguntas que sobre política y cados de renta perpétua, y continuó
sobre los diversos reinos que habia re siempre aumentando su favor y vali
corrido le hizo Felipe II, fueron tan miento con una liberalidad estraordi
exactas las observaciones que hizo, naria y desusada hasta entonces y agena
tan rectos los juicios que espuso sobre de su carácter parco y miserable.
las cosas, sobre las personas, y, sobre Felipe II, cuyo carácter sombrio y
las materias mas complicadas de Es tétrico no se dejaba dominar por na—
tado, que Felipe II, que tenia su vani die, cede en todas ocasiones, y se pre
dad en sus conocimientos geográficos, senta dócil á las voluntades y capri
históricos y de ciencias morales, se chos de la hermosa jóven que hábia
sorprende y reconoce á primera vista logrado dominar el corazon del rey,
que el jóven que se le presenta es el que hasta entonces habia parecido im
hombre que le conviene, es el ministro penetrable á las pasiones y los afectos
que necesita para su política profunda del amor.
y misteriosa. El anciano príncipe de Eboli fué
Asi es que Antonio Perez sale de elevado á las mas altas dignidades del
la presencia del monarca ya con todo Estado, y su esposa era la belleza do
su favor, y bien pronto debia ser su minante en palacio. A tiva con su her
único confidente y favorito. mosura, humillaba á los grandes, como
A los veinte y cinco años se ve se habia humillado al rey: de imaginacion
cretario de Estado, se ve colmado de viva y fecunda, ansiosa de placeres, no
favores y rodeado de aquella córte en podia ver en dos ancianos, ni en su es
que se veian príncipes y poderosos se poso ni en su real amante, la satisfac
ñores estrangeros que traian á Madrid cion de sus deseos.
sus pretensiones desde los diversos Asi el rey se valió de su ministro
reinos que dominaba la España. Tan Antonio Perez, á causa de que, sobre
jóven, se ve sobre la primera grada sus cualidades prºles, tenia grande
l
4 30 CAUSAS CELEBRES.

entrada y acceso en la casa de la prin das y haciendas podia deshacerse de


cesa por ser el protegido del príncipe cualquiera de sus vasallos que tuviese
de Eboli, que le amaba tanto, para que por conveniente, ora entregándole á
fuese agente de sus amores, depositan los tribunales, ora haciéndole ejecutar
do en su corazon el secreto de su pa en secreto: consideraba al rey como la
sion. Antonio Perez al servir en un fuente de la justicia; á los tribunales
principio con lealtad la pasion del rey, como meros delegados para ejecutar
al hablar contínuamente con la prince su voluntad, y á las formas judiciales
sa, aunque en nombre de Felipe II, del como medios únicamente para ilustrar
amor que aquel sentia, concibió el au al juez, no para embarazar la accion
daz proyecto de rivalizar con el monar del monarca en quien reasumia todo
ca y con el amigo que á él se habia con derecho, toda justicia, todo poder.
fiado; y acostumbrado al trato de las Asi es que por consejo de este mis
mugeres, con gracias personales se mo confesor, Felipe II usa de esta doc
ductoras, con una con versacion fina, trina haciendo ahorcar en secreto sin
galana y delicada, contando con la va formacion de causa al baron de Mon
midad y capricho de una muger á quien tigny, en Simancas, como hemos visto
veia todos los dias, que tenia una ima al hablar de la causa de don Cárlos; y
ginacion tan ardiente, se hizo amar de le veremos decretar tambien mas tar—
ella, y vió correspondida su pasion. de la muerte de Escobedo, fundamento
Uniéron se en lazo comun aquellas y orígen de la causa en que nos ocu
dos almas nacidas la una para la otra; pamos: y todo esto con la conciencia
conocieron los peligros á que se espo mas tranquila, creyendo haber ejecu
nian y los desafiaron todos. Aun cuan tado un acto comun y ordinario de go
do el rumor público hizo llegar alguna bierno. Verdad es que las muertes se
vez á los oidos del rey las sospechas cretas eran muy frecuentes en aquellos
de estas relaciones, creia que los tiempos; por lo que Felipe II, creyó
cortesanos atribuian á su causa propia hasta el último momento de su vida,
cuanto hacia en su nombre, y por él. que solo habia usado de un derecho al
El príncipe de Eboli no amaba á su ordenar la muerte secreta de Escobe
esposa, y miraba con indiferencia las do, cabiéndole solo dudas acerca de si
relaciones amorosas que tenia, porque pudo ser engañado sobre la causa que
cada dia su poder iba en aumento. la motivó.
Muerto el príncipe de Eboli, su espo Al lado de todos estos personages
sa cada vez mas enamorada de Antonio hay que colocar en la córte otra per
Perez, se entregó á rienda suelta á su sona, si bien de modesta figura de al
pasion, olvidando el terrible y podero tísima importancia por el hombre á
so monarca á quien engañaba; siendo quien representaba. Hablamos de Juan
tal su imprudencia que dió ocasion á Escobedo, secretario de don Juan de
que no cupiese duda al señor de dos Austria. Don Juan de Austria, á quien
mundos de que era el objeto de la bur hemos dado á conocer á nuestros lec
la de su amante y de su ministro. tores ya en la causa del príncipe
Era confesor del rey fray Diego de don Cárlos, habia nacido para la guer
Chaves, hombre de buenas costum ra; habia rechazado el destino á que
bres, pero de cortísimos alcances; ha su padre Cárlos V le designara se
bia sido el confesor del desgraciado ñalándole , para la Iglesia, porque ha
bia sentido hervir en sus venas la
príncipe don Cárlos, habia servido los
proyectos de Felipe II en aquella ter sangre de aquel monarca guerrero: y
rible catástrofe, hombre que creia do los estraordinarios triunfos y los gran
minará su augusto penitente, que no era des servicios que prestó á su patria,
mas que el instrumento que manejaban justificaron su noble ambicion. Redu
sus robustas y sus diestras manos, sin cíase esta á tener el tratamiento de Al
saber ni conocer de todos los asuntos teza y la consideracion de infante de
en que intervino mas que lo que queria España: pretension que repetia con
Felipe II. Era de los casuistas de aque ahinco, pretension á que todo el mun
llos tiempos, que sostenian la doctrina do accedia dándole este tratamiento
de que el soberano como señor de vi dentro y fuera del reino, á escepcion
*. ANTONIO PEREZ. 13

de su hermano. Y de seguro, que si Emprende despues la campaña del


alguna vez puede suplir el mérito y el reino de Tunez, y es una de las pági
valor á la ilegitimidad del nacimiento, nas gloriosas de la historia de don Juan
en nadie se verificó esto mejor que en de Austria. Alli se suscita tambien la
don Juan de Austria. idea de que una corona ciña la frente
Activo, lleno de gloria y de repu del bastardo de Cárlos V.
tacion qué mucho que aspirase al in Felipe II despues de maduras refle
fantazgo de España y aun á la corona xiones con el consejo de Estado, man
en un reino estrangero el que miraban da que se desmantelen las murallas de
todos como un héroe! Asi es que des aquella importante ciudad. Pero don
pues de la batalla de Lepanto, despues Juan, animado con el parecer de su se
de haberle recibido en sus brazos el cretario Soto, cree que desde aquella
papa Pio V, sintió nacer en su corazon ciudad es fácil conquistar y dominar to
deseos propios de su nacimiento. Las da el Africa y hacer de ella la metró
alabanzas que le prodigaban los vene poli y el centro comercial del Mediter
cianos, las atenciones del papa, las li ráneo; y cree tambien que alli se puede
sonjas de la Francia, le inspiraron una levantar un imperio cristiano podero—
alta idea, y tanto los aliados como los so, alli donde siglos antes habia pere
enemigos de Felipe II, tuvieron parte cido la flor de los cruzados de San
en que se formasen en su cabeza planes Luis.
que alarmaban el genio suspicaz y me Con desprecio de las órdenes reci
ticuloso de su hermano. Cuantos de bidas de Madrid, solicita del papa la
seaban hacer fortuna, los hombres de creacion de un nuevo reino, y Pio V,
corazon que veian en las arriesgadas ese pontífice tan grande como político
empresas un medio de medro y de glo y como santo, por medio de su nuncio
ria, pedian alistarse en las banderas en España solicita de Felipe II que
del jóven don Juan de Austria, repu consienta en la creacion de un reino
tado por el primer capitan de su época. para ceñir con su corona la frente del
Trató el rey de poner á su lado con vencedor de los turcos en Lepanto, el
el cargo de secretario hombres que pu que habia salvado á la Europa de una
diesen dirigir el genio inquieto y beli nueva irrupcion del islamismo.
coso de su hermano. Primero, y en Felipe ll, suspicaz, receloso siem
vida del príncipe Rui Gomez, por con pre en el mas mínimo ápice de su au
sejo suyo, colocó á su lado al secre toridad, disimula su justo enojo al ver
tario Juan de Soto, hombre de anti que no habia tenido mas noticia de los
guos servicios y reconocida esperiencia, planes de su hermano que por la me
y que se habia distinguido notable diacion del pontífice. Contesta á éste
mente en el despacho de la secretaría en términos corteses, pero le mani
de los asuntos de Nápoles. Sobresalia fiesta las poderosas razones que se opo
principalmente en la administracion nen á su plan, afectando grande amor
militar. Fué á reunirse con don Juan y cariño á su hermano.
de Austria cuando se hallaba conte Entretanto don Juan de Austria
niendo el levantamiento de los moris desobedece las órdenes; mantiene la
cos de la Alpujarra. Con sus consejos ciudad y el reino de Tunez y añade
su esperiencia, contribuyó al exito fortificaciones, las guarnece con lo me
rillante de aquella jornada. A la vista jor de sus tropas, con lo mas fuerte
de aquel héroe, al poder apreciar de de su artillería y pertrechos de guerra.
cerca sus bellas cualidades, tomó parte Sucesos posteriores vinieron á jus
en las empresas que meditaba, y lejos tificar la prevision de Felipe. Sinam
de contener su ambicion le sirvió po— Baja d Aluch—Ali aprovechándose del
derosamente. desórden y descuido de los cristianos,
Sometida la Alpujarra, castigado ek. sitian y ganan la Goleta y su fuerte, á
levantamiento de los moriscos, don pesar del heróico valor que desplegan
Juan marcha á Italia, y su secretario alli los italianos y los españoles, y dan
Juan de Soto, siempre á su lado, co á los turcos una gran preponderancia.
opera con él á las grandes empresas Todo esto se atribuia á los consejos de
con que alli se distingue, -
Juan de Soto. -
132 (AUSAS CELEBRES.

Entonces Antonio Perez, y don cuyo trono ocupaba entonces su hija


Juan Escobedo se presentan á Feli Isabel.
pe II, le esponen los , perjuicios que Felipe II cree conveniente separar
traen los desaciertos de aquel secre á don Juan de Austria de las inmedia
tario y la necesidad de separarle de su ciones del pontífice, y le confiere el
lado. Felipe trata entonces de poner al gobierno de las provincias de Flandes.
lado de su hermano á Escobedo, y por Admite don Juan de Austria aquel go
no disgustarle al separar de su lado á bierno, y envia á Escobedo, su secre
su favorito Soto, le nombra proveedor tario y el confidente de sus mas ínti
de la armada , destino entonces de mos pensamientos, á Madrid, para que
gran consideracion, y sobre todo de arregle todo lo necesario al efecto.
crecidísimos emolumentos y al que in Mientras se hallaba en Madrid Es—
dudablemente lo hacian muy á propó cobedo, recibió Antonio Perez el aviso
sito sus talentos en la administracion del nuncio de haber tenido un despa
militar. cho de Su Santidad en cifra, mandán
Colocado Escobedo al lado de don dole que procurase obtener del rey el
Juan de Austria, que habia vuelto á consentimiento para la pronta realiza
italia, precisamente para seguir una cion del matrimonio de don Juan con
marcha distinta de la de su antecesor la reina de Inglaterra, y la seguridad
Soto, se dejó arrastrar de la admira de que él le daria su investidura, todo
cion que le inspiraba aquel principe, en la manera y forma que Escobedo le
de su carácter ardiente y ambicioso, y propusiese.
lejos de retraerle de los proyectos en Antonio Perez ofreció guardar se
que se hallaba empeñado, fué su mas creto acerca de esta nota, pero dió
activo favorecedor y les dió nuevo y cuenta de ella al rey; y éste que obs
mas fuerte impulso. tinadamente negaba á su hermano el
Escobedo era hombre de mas talen título mas modesto de Alteza y la con
to y al mismo tiempo de mas actividad sideracion de infante, se negó mucho
que Soto; asi es que se dedicó á soste mas á favorecer en nada un proyecto
ner una activa correspondencia con los que pudiese colocar sobre sus sienes
cardenales mas influyentes de la córte una corona, y darle tratamiento de
romana, oculta toda bajo el velo del Magestad.
mas profundo misterio. El mismo Es— Era don Juan de Austria impacien
cobedo iba y venia á menudo á la cór— te, y al ver la dilacion que daba el rey
te pontificia, á pretesto de comisiones su hermano á estas negociaciones, se
del gobierno conferidas por don Juan, presentó él mismo en Barcelona con
que tenia alli, poderosas relaciones, y dos galeras, á dº de la órden
era considerado como una de las per— terminante que habia recibido de su
sonas mas importantes de la cristian soberano de marchar directamente
dad, desde que habia vencido á la mo desde Italia á los Paises Bajos, sin que
risma en Lepanto. sus buques entrasen en ningun puerto
El embajador del rey de España en español.
Roma, don Diego de Zúñiga, comenda— Este primer acto de desobediencia
dor de Castilla, tenia muy al corriente hirió mucho el ánimo suspicaz de Fe—
al ministro Antonio Perez de todos los lipe II; empero disimulado como lo era
pasos que se daban en Roma, de los en todas las grandes ocasiones, recibió
proyectos que ali se fraguaban. afable á su hermano, oyó con pacien
Ocupaba entonces la silla pontificia cia sus pretensiones, las aplazó con ma
Sisto V, el papa de las grandes empre ña, dejándole entrever que mas ade
sas; y aquel soberano pontifice, que lante le concederia el infantazgo y tra
desde el humilde oficio de pastor de tamiento de Alteza; y que si terminaba
puercos habia subido por su propio felizmente la guerra de Flandes, y los
mérito á la elevacion del pontificado, Estados concedian que por mar pudie
habia concebido el proyecto de hacer sen salir los soldados estrangeros que
volver á entrar en el gremio de la Igle ocupaban el territorio, se verificaria
sia católica á la Inglaterra, separada entonces aquella empresa que era el
de él por el cisma de Enrique VIII, y objeto de sus deseos y de sus afanes.
N.
ANTONIO PEREZ. 133

Asi Felipe II escitaba hasta cierto pun Empero Felipe II era un hombre muy
to la ambicion que hervia ya en el pe— prudente; el disimulo y la reserva has
cho de su hermano; y éste marchó en ta el mormento decisivo de obrar, sfor
compañía de Escobedo para los Paises maba el sistema de su carácter. Asi es
Bajos. que no conformándose con lo propues
El plan colosal de Felipe II era in— to por Antonio Perez, le encargó que
vadir con sus tercios de Flandes la In le escribiese, y que siguiera enten
glaterra, y rescatar á la desgraciada diéndose con él cual si nada hubiese
María Estuardo, con quien se hallaba sabido.
en activa correspondencia, y que es— De acuerdo, al parecer, el secre
taba presa en la Torre de Lóndres, tario de Estado con el de don Juan,
donde debia caer en breve su cabeza á y por medio de un juego doble, de
impulsos del hacha del verdugo. nunciaba al rey las intrigas de éste, al
Conocia Felipe II que él seria el se paso que lisonjeaba su ambicion. De
ñor del mundo y el príncipe mas po aqui es que engañado , el príncipe le
deroso del cristianismo, si lograba ca— mandó en cifra varios despachos, á fin
sando á aquella desgraciada reina con de que impidiese que se retirase la
don Juan hacer desaparecer el poder gente de Flandes á Italia, ofreciéndole
de su hermana Isabel, porque entonces para ello ricos presentes y crecidas
bajo el nombre de don Juan de Aus— cantidades. Antonio Perez contestaba
tria, se obedecerian sus determinacio prometiéndole acceder á sus deseos;
nes en toda la Inglaterra, y el pabellon y los soldados entretanto no salian
español dominaria sin rival en todos como debieran de las provincias de
los mares. Flandes.
El príncipe de Orange penetró las El príncipe de Orange, que era el
intenciones del monarca español, y alma y el caudillo de la reforma, pe
oponiéndose á los proyectos del rey, netró la noticia del indicado casamien
impidió la ruina de la Inglaterra. Los to, conveniente á sus fines, y puso en
Estados no consintieron la salida por comunicacion por su mediacion á los
mar de los soldados estrangeros que pretendidos novios.
habian restablecido la paz en las pro Ya entonces tenia conocimiento el
vincias de Flandes, y no pudo llevarse rey por medio de su embajador en Pa
á efecto tan colosal empresa. rís don Juan de Vargas Mejía, y por las
Vió desvanecerse don Juan la co— comunicaciones confidenciales de don
rona que se preparaba para su cabeza Juan y de Escobedo con Antonio Percz.
con el consentimiento de su hermano, Meditaba Felipe II el medio de ata
y entonces volvió áreanudar sus rela jar aquellos males, y revolvia en su
ciones con Roma. Ya no se trataba en— mente diversas medidas para impedir
tonces de María Estuardo, aquella in tales proyectos, cuando Escobedo, al
feliz víctima de los odios de su herma que se suponia autor é instrumento de
na Isabel, sino de la mano de esta mis aquellos arriesgados planes, llegó á
ma, creyendo el papa que una vez ca— Santander, y de Santanderá Madrid.
sada aquella poderosa é inflexible rei Aqui comienza, pues, la accion del
na con el vencedor de Lepanto, abju— drama que va á desarrollarse en esta
raria por su influjo el protestantismo, célebre cansa, y cuyos principales ac
y volverian sus súbditos á la comunion tores hemos procurado dar á conocer.
de la Iglesia católica. Mandó el rey á Antonio Perez que
Don Juan de Austria recibió breves, saliese á recibir á Escobedo, y que tu
bulas, dinero, cuantos socorros podia viese sumo cuidado y vigilancia con
proporcionar en aquel entonces la silla todos sus pasos y con todas sus accio
romana; y sin embargo, el rey nada nes, á fin de penetrar mejor su inten
sabia de oficio ni particularmente. cion, y asegurarse de su conducta.
Antonio Perez vió el vuelo que lle— Desde entonces, pues, aquellos dos
vaban los negocios; conoció que Esco— hombres hábiles y ambiciosos, que se
bedo atizaba con sus insinuaciones la tenian por muy amigos, que se trata
llama de la ambicion de don Juan, ban con la mas aparente intimidad,
propuso la separacion de Escobedo. comenzaron á observarse mútuamente,
4 34 CAUSAS CELEBRES.

mientras el rey se proponia perder al ca la entrada en casa de su viuda.


uno por medio del otro; al uno por mo El marqués de Favara y el conde
tivos políticos de que tenia casi una de Cifuentes le habian enterado de
certidumumbre; al otro por motivos aquellas sospechas, y le recordaron
personales de que comenzaba á tener como una comprobacion de ellas la
algunas sospechas. - repugnancia que habia opuesto años
Nada omitió Escobedo para tener antes Antonio Perez á contraer su ma
en favor suyo á Perez, que ademas de trimonio que le dictaban los deberes
la íntima amistad que al parecer le de la conciencia y á que le obligaba el
profesaba ahora, fué ya su antiguo príncipe mismo de Eboli con doña Jua
amigo. na Coello, muger de alto linage y de
Dueño Escobedo de los secretos de particulares prendas, y en que habia
Perez y de los de don Juan de Austria, mediado el mismo Escobedo por órden
esperaba ser despachado en breve en de Ruy Gomez de Silva cuando Antonio
la importante comision que traia de Perez se manifestaba reacio y poco
su señor, que era dar cuenta al rey de dispuesto á verificarlo. -

las plazas que aquel iba ganando, y ro En la misma casa de la princesa de


arle que no se olvidase de lo prometi Eboli los criados enteraron á Juan de
o respecto á la empresa de la Ingla Escobedo, de la pasion que mediaba
terra, pues confiaba que en breve las entre Antonio Perez y su ama, quienes
provincias flamencas se hallarian del no se recataban para nada en sus inti
todo sometidas. midades amorosas.
Antonio Perez, mediador del rey y La princesa enviaba regalos de con
de su hermano, era dueño de todos los sideracion á Perez desde su palacio de
secretos mas importantes de la mo Pastrana; y el mismo arzobispo de Se
narquía. villa, don Rodrigo de Castro, en una
Conocia bien la córte Juan Escobe de las declaraciones que están en su
do, y temia por algunos desaires que proceso, dice que Antonio Perez se
habia recibido de Felipe II que se re servía de las cosas de la princesa como
pitiese en él el ejemplo de Juan de So de las suyas propias. Otros muchos
to, y que su posicion, y su vida tal veian las familiaridades de todo géne
vez, dependerian de las comunicacio ro á que se entregaban, y como testi
nes que él iba haciendo. Asi miraba gos las han consignado en su causa.
con la mayor reserva á Antonio Perez, La princesa de Eboli disculpaba estas
cuya doblez comenzaba ya á no ser un muestras señaladas de afecto, dando
misterio para él. á entender y corroborando la idea que
Viendo cuán poco adelantaba en su algunos tenian de que Antonio Perez
comision, como hombre prudente tra era hijo de su marido Ruy Gomez de
tó de observar con cautela las intrigas Slva. -

que en su alrededor se cruzaban, y El marqués de Favara, pariente de


procuró adquirir ademas prendas que la princesa, confiesa en el proceso ha
pudieran ponerle á cubierto de la mala ber visto tales cosas que encendieron
fé del secretario de Estado, que por tan su ánimo, en términos de querer matar
su amigo se vendia. º á Antonio Perez, tanto que en un Jue
No pudo menos de fijarse en los ru ves Santo tuvo que entrarse en la igle
mores que circulaban en la córte entre sia de Santa María á pedir á l)ios fer
las personas que se creian mejor ente vorosamente que le quitase tal pensa
radas, acerca del trato íntimo de la miento.
princesa de Eboli con Antonio Perez Dueño Juan de Escobedo de este
Fácil le fué enterarse á fondo sobre la
secreto de Antonio Perez, hechura
verdad de aquellos rumores, y adqui del príncipe de Eboli, como él, pero
rir la prueba por sí mismo, porque ha indignado de que asi se ultrajase su
biendo servido por mucho tiempo al memoria, lo reprendió un dia, creyen
príncipe de Eboli, de quien fué muy do de este modo subyugar al ministro
amigo, y á quien en parte debió tam á la vez que á la favorita, pero no hizo
bien el haber sido secretario de don mas que acelerar su pérdida. Antonio
Juan de Austria, tenia facil y fran Perez aparentó redoblar la amistad, y
ANTONIO PEREZ. 433
-

le prometió todo su valimiento con el que habia hecho Escobedo para llevar
rey; pero la princesa sin inmutarse en adelante la empresa de Inglaterra, y
lo mas mínimo le respondió con el mas le recordó que en público habia dicho
irritante desaire, confesando en su ar ante varios señores antes de marchar
rebato sin pudor alguno que amaba á Flandes, ¿ siendo dueños de Ingla
mas uno de los cabellos de Antonio terra se podrian alzar con España, so
Perez que al mismo soberano en per lo con tener la entrada de Santander
sona, recordándole ademas con des y su castillo, con un fuerte en la Peña
precio la distancia que le separaba de de Mogro, añadiendo que cuando se
ella, dama de la primera gerarquía, perdió la nacion española se habia
mo siendo él mas que un escudero restaurado y reconquistado desde las
afortunado. lmontañas.
En tanto crecian los manejos de Este acto unido á sus jactancias le
don Juan de Austria, y sus intrigas en constituiap á los ojos del rey como reo
Francia; y Perez sabedor de todas ellas de sedicion, y era fuerza el proceder
se las comentaba al rey, y le pondera secretamente á su castigo para evitar
ba la necesidad de deshacerse del hom turbulencias.
bre que tan pérfidamente aconsejaba Felipe II habia adoptado las doctri
al príncipe don Juan. Felipe II, siem nas de su confesor, el padre fray Diego
pre prudente y detenido en el obrar, de Chaves, ese casuista cuyo carácter
se resistia á castigar con la muerte al hemos procurado delinear brevemente
hombre que comprometia la lealtad deá nuestros lectores, consultó con don
su hermano. Queria á éste como á un Pedro Fajardo, marqués de los Velez,
verdadero hijo, y en su corazon suspi del consejo de Estado, y mayordomo
caz y receloso luchaba el afecto que le mayor de la reina doña Ana.
profesaba; pero insistia tanto Antonio El marqués de los Velez era un
Perez, y eran tales las pruebas de la hombre entusiasta de Antonio Perez,
traicion que le presentaba, de tal gra de poquísimos alcances, y que se ple
vedad las exigencias que hacia don gaba facilísimamente á la voluntad de
Juan de Austria por medio de su em aquel ministro. -

bajador, que ya pareció que no era Reunidos en conferencia secreta, el


bastante para atajar los daños que ame rey, el marqués y Perez que llevó to
nazaban el separar de su lado al ambi dos los papeles que podian comprobar
cioso secretario. las culpas de Juan de Escobedo, el
Este, creyéndose fuerte y vence marqués de los Velez con la mayor se
dor á la hora que quisiese de Antonio guridad dijo al rey que hasta con el
Perez, con el arma que se habia pro sacramento en la boca votaria la muer
curado, hablaba sin la menor conside te de Escobedo. Entonces se decretó
racion del rey, y con el mayor despre su ejecucion por el rey, habiendo te
cio de la princesa y de Antonio Perez; nido el cuidado y habilidad Antonio
soltaba punzantes sarcasmos contra Perez de procurarse algunos documen
sus amores, y si bien en público apare tos y billetes de Felipe II en que se ha
cia íntimamente unido con el ministro, blaba de este suceso: documentos que
en secreto no se cuidaba de ocultar el veremos despues hacer un papel prin
odio profundo con que se aborrecian. cipal en esta causa.
No podia durar largo tiempo esta Habia considerado Felipe II, que
situacion: tenia que resolverse preci volverle al lado de don Juan era ar
samente por la pérdida de uno de los riesgado, que no era posible entrete—
dos rivales; y una circunstancia vino nerle mas tiempo so pretesto de las
á acelerar la ruina de Escobedo. comisiones que traia; y que entregar
Una de las pretensiones de este se le á los tribunales era tal vez lanzar á
cretario fué la de que se fortificase la don Juan en la rebelion por hacerse
Peña de Mogro, junto á Santander, y superior á los peligros que debia te
que se le diese el gobierno de ella. mer. No habia, pues, otro medio que
Aprovechó Perez aquella ocasion que acudir á esa tenebrosa jurisprudencia
ansiosamente anhelaba para perderle. que entonces regia de sentenciarlo en
Hizo recordar al rey todas las tentativas secreto, y encomendar la ejecucion de
133 CAUSAS CELEBRES.

la sentencia al tósigo ó al puñal. A uno Frustradas las diferentes tentativas


y á otro se apeló, pero cuidando de de en venenar á Escobedo, determinó
que pareciese hijo de una venganza Antonio Perez acudir á un medio direc
particular la ejecucion de este de to, y mandó á Barcelona al page Antonio
Cret0. Enriquez á buscar un pariente suyo pa
Condenado á muerte secretamen e ra que le ayudase á la muerte, mientras
en aquel misterioso tribunal, Escobedo el mayordomo Diego Martinez hizo lla
continuó por algunos dias paseando fa mar al aragonés Juan de Mesa, que
miliarmente coa su verdugo sin aper trajo consigo á un célebre maton de
cibirse de su terrible destino. llábil y genio atroz, llamado Insuati.
profundamente aumentó Perez las prug Reuniéronse y concertaron los me
bas de afecto que le prodigaba. Le hacia dios de llevar adelante su crímen,
comer con frecuencia en su casa, ha acordando usar del estoque y no de la
biendo elegido como medio de ejecu ballesta, ¿mas certero el golpe. Ar
cion para su muerte, el veneno. Uno regladas friamente y tomadas todas las
de sus pages llamado Antonio Enri medidas para este asunto, Antonio Pe
quez, y su mayordomo Diego Martinez, rez, para mayor disimulo, se marchó á
se prestaron á ser los instrumentos la ciudad de Alcalá de Henares unos
del asesinato, habiendo marchado este dias antes so pretesto de pasar la Se
último primero á Murcia á buscar unas mana Santa. -
yerbas emponzoñadas, que no surtie ltondaban contínuamente por la
ron buen efecto. plaza de Santiago todas las tardes al
En medio de las mas alegres y ani anochecer Miguel Bosque, Juan Rubio
madas conversaciones, sin inmutarse é Insuati, espiando una ocasion opor
lo mas mínimo, sin perder el apel ito, tuna para cometer el crímen, quedán
cuidaba Antonio Perez en otra comida dose a cierta distancia para guardarles
de que se mezclase con el veneno una las espaldas y auxiliarles en caso ne
agua sinsabor, pero envenenada, que le cesario, Juan de Mesa, Antonio Enri
habia proporcionado un boticario. Tam quez y Diego Martinez. Varios dias
poco esta vez hizo efecto el veneno. aguardaron en vano, y no pudieron
Fué necesario echar mano de otro, llevar á efecto su proyecto, ya por el
y un dia en un magnífico banquete que tránsito contínuo de gentes, ya porque
daba en su casa y al que asistia la mu Escobedo no venia solo. Por último, su
ger de Antonio Perez y la de Escobe desgracia hizo que el dia segundo de
do, hizo que el page Antonio Enriquez Pascua de Resurreccion, 31 de marzo
echase una gran cantidad de polvos de 1578, á las siete de la noche se pre
minerales en el plato de Escobedo. sentase descuidado y de vuelta de pa
Retiróse despues de la comida en lacio. Arrojáronse de pronto los asesi
fermo, pero sin sospechar nada , y nos sobre él, é Insuat i le dió tal esto
mientras se hallaba convaleciente del cada, que no hubo necesidad de darle
mal, del que habia triunfado su cons mas golpes. -

titucion robusta, un pinche de la coci La noticia de la muerte cundió rá


na del rey llamado Juan Rubio, hom pidamente, y cual si hubiese un acon
bre de distinguido nacimiento, que tecimiento estraordinario en la córte,
se habia reducido voluntariamente á corrian las gentes y cerrábanse las
aquella villana condicion para ocultar puertas de las casas. A favor de la con
su persona por el asesinato que habia fusion y de la oscuridad de la noche,
hecho de un canónigo de Cuenca, in se retiraron libremente los asesinos.
troduciéndose en la casa de l.scobedo Aquella misma noche, Juan Rubio
le echó unos polvos en la comida pre salió para Alcalá á dar cuenta á Anto
parados para este; pero su mal salor nio Perez del resultado de la ejecucion.
al probarla le hizo que la dejase, y ha Este le mandó que volviese á Madrid,
biendo recaido las sospechas sobre una y el mayordonmo les entregó cien escu
infeliz esclava que servia en su coci dos á cada uno, encargándoles la ma
na fué alhorcada en la Plaza Mayor y or reserva en las con versaciones que
de Madrid, sin mas formalidades y pudieran tener con sus amigos. Pero
pruebas. para asegurarse mas todavía de su si
ANTONIO PEREZ. 137

lencio, hizo Antonio Perez que en bre Desgarradora fué la escena en que
ve saliesen todos de la córte. Tres de aquella infeliz viuda vestida de luto y
ellos recibieron veinte escudos de oro rodeada de sus hijos, demandaba á Fe
al mes y el nombramiento de alférez, lipe II la satisfaccion del horrible agra
que preventivamente tenia firmados en vio que la habian ocasionado, y en que
blanco por el rey. Antonio Enriquez el monarca habia tomado una parte tan
marchó á servir á Nápoles, Insuati á principal. Entonces el hijo mayor de
Sicilia, y Juan Rubio á Milan. Estos Escobedo reveló al rey lo que nadie
nombramientos tienen la fecha del 19 hasta entonces habia osado decirle ca
de abril de 1578, están firmados por ra á cara, y le contó cuantos pormeno
el rey, y refrendados por Antonio res habia oido á su padre de los amo
Perez. Para que no tuviesen conoci res de Antonio Perez y de la princesa
miento de ellos los oficiales de la se de Eboli.
cretaría, no se anotaron en los libros Acostumbrado Felipe II á oirlo todo,
generales de registro, tomándose razon aun las cosas que mas afectaban su co
de ellos en un pliego aparte. razon, con faz inalterable y fria, oyó
Sin cuidado ya por Escobedo, segu sin alterarse la terrible acusacion que
ro de que su trato familiar con la prin debia perder á su favorito. No dió en
cesa pudiera llegar á descubrirse por la apariencia valor alguno á la acusa
el rey, con la imprudencia que da el cion, y recibiendo el memorial en que
amor aun á los hombres mas entendi le pedian justicía la esposa y º
dos y dando suelta á la pasion amorosa jos de la víctima, le dió el curso acos
que se habia visto precisado á compri tumbrado.
mir por las amenazas de Escobedo, se El rey dejó correr, tal vez á pesar de
abandonó Antonio Perez al amor con lo que él mismo se habia propuesto, la
una seguridad fatal que debia produ acusacion entablada contra Antonio Pe
cir su perdicion. rez. Este, no comprendiendo el fin que
Honda sensacion causó en el ánimo se proponia Felipe II, no podia sospe
de todos el asesinato de Escobedo, ya char en lo mas mínimo que fuese sa
por la alta dignidad que ¿ bedor de sus relaciones amorosas con
al lado de don Juan de Austria, perso la princesa, porque conocedor bastan—
na tan visible en aquella época, ya por te de su carácter terrible y vengativo,
el interés que escitaba el misterio de hubiera encomendado la satisfaccion
que se hallaba rodeada su muerte, y á de su agravio á un castigo pronto, en
que daba y atribuia diversas causas el vez de tiarlo á un largo proceso, en el
espantado vulgo. que el mismo rey sabia que el minis
Hablábase, aunque en voz baja, en tro habia de salir completamente libre.
tre mejor enteradas de la Asi es que cuando el rey le escribió
córte, de que habia gran resentimien á Alcalá avisándole de la querella que
to entre Antonio Perez y la princesa contra él se habia presentado, y de las
de Eboli contra el desgraciado Escobe enemistades que contra él se levanta
do por haber descubierto sus amores y ban, Perez le manifestó sus temores y
por haberlos criticado libremente en cuidados, y le decia «que no creía con
varias reuniones; y la opinion, ese sen veniente la remision al presidente del
timiento que inmediatamente se le Consejo de Castilla de la querella sin
vanta en el pueblo en cuanto se come oir su traza.» Concluyendo con de
te un crímen, señaló como reo de aquel cirle en sus cartas: «Mírelo V. M., ó si
delito al secretario de Estado y como se remite no lo debe hacer el presi
cómplice á la princesa favorita del dente sin oirme, pero por mejor ter
rey. nia que S. M. con la ocupacion de estos
La muger del desgraciado Escobedo dias le entretuviese, y yo comunicaré
ä. hijos se presentaron al rey pi al presidente mi traza, y las memo
iendo justicia; y bien movidos por el rias, si le paresce á V. M. tambien se
rumor público, bien escitados por los podrá hacer esto.»
enemigos de Perez, acusaron á éste co El rey le contestaba de su mismo
mo autor del asesinato, y como insti puño y letra con la mas cariñosa fami
gadora á la princesa. liaridad, tranquilizándole y prome
18
138 CAUSAS CELEBltES.
==e

tiéndole no abandonarle nunca. Asi le


la edad, la alta gerarquía del primer
decia: funcionario de la nacion, y lo desti
tuidos de pruebas en que se hallaban
«Paresceme que no se puede dejar los acusadores, guiados y movidos solo
de remitir esto al presidente, aun pa por el rumor público.
ra la misma traza que hoy me dezades. Asi es que el presidente de Casti
Pero será bueno no hacerlo hasta vol lla, dirigiéndose al hijo mayor de Esco
ver aqui, porque vos tengais tiempo bedo le dijo:
de hablar al presidente; y si os pare— «Señor Pedro de Escobedo, el rey
ciese que será esta bien asi, avisád.— me ha remitido estos memoriales vues
melo; y es muy bien que vos comuni tros y de vuestra madre, en que pedis
queis vuestra traza al inte,
y justicia de la muerte de vuestro padre
las memorias como aqui decis.» contra Antonio Perez y la señora prin
cesa de Eboli, y me manda os diga que
En otra carta pretendia Antonio Pe se os hará justicia cumplidísima, sin
rez que el proceso se dirigiese á él escepcion de persona, ni de lugar, ni
solo, separándose de la causa á la de sexo, ni de estado. Pero primero os
princesa por mediar en ello la honra quiero yo decir que mireis bien qué
de una señora; pero Felipe II no quiso fundamento y recursos teneis para la
mandar esto, y encargó al presidente probanza, y que sean tales que esteis
del Consejo de Castilla, don Antonio disculpado de la ofensa de tales per
Pazos, obispo de Córdoba, persona su sonas. Porque no siendo muy bastan
mamente afecta á Antonio Perez, que tes, y por eso disculpables, vuestra
hablase al hijo de Escobedo para que querella se convertirá en demostra
desistiese de la acusacion. cion contra vos, por ser la princesa la
Asi lo hizo el arzobispo, despues de persona que es, y su estado y gran ca
haber conferenciado con Antonio Perez, lidad mucho de reverenciar; y Antonio
y de haberle contado éste las causas Perez, el que es por hijo de padres y
de aquella muerte, el modo como se abuelos tan antiguo criado de la coro—
habia ejecutado, el compromiso en que na, y por el lugar que él tiene. Pero
el rey le colocaba si continuaba la antes que me respondais os digo tam
causa, y la ofensa que se hacia al ho— bien en conciencia, y afirmo in verbo
nor de la princesa, en lo que parecia sacerdotis que la princesa y Antonio
sumamente interesado. Perez están tan sin culpa como yo.»
Como los hijos de Escobedo se ha— Entonces Escobedo le dió al obispo
llaban sostenidos por los enemigos de presidente su palabra de honor por él,
Antonio Perez, entre los que sobresa ¿ su hermano, y por su madre de no
lia principalmente Mateo Vazquez, an ablar mas de aquella muerte contra
tiguo secretario del rey y enemigo de la una, ni contra el otro.
aquél, acordó Felipe Il que el presi Despues veremos cómo cumplió es
dente de Castilla hablase tambien á ta palabra.
Mateo Vazquez. No fué tan dócil ó las insinuaciones
Nada podia resultar contra Perez del presidente de Castilla el secretario
acerca del asesinato de Escobedo. El, Mateo Vazquez á las reflexiones que
al tie:upo en que se habia cometido el le hacia aquel de que solicitaba mucho
crímen, se hallaba distante de Madrid, del rey sobre esté asunto, él que no
en Alcalá de Henares. Los asesinos ha tenia oficio mayor que le obligase á
bian huido todos; nadie los conocia, ello, ni era deudo, ni tenia obligacion
no habia, pues, prueba ninguna para al muerto, siendo muy sospechosa la
una acusacion de tan terribles conse solicitud que mostraba, aconsejándole
cuencias, y dirigida, contra una perso ¿º
mient OS.
mas medida en sus proce
na de tan alta posicion.
Esperaba Antonio Perez que con el Aparentó no obstante calmarse al
paso que iba á dar el presidente de gun tanto, y Antonio Perez pareció
Castilla con los que hasta , entonces se tambien respirar algunos dias libre de
mostraban sus perseguidores, todo las persecuciones que en t Orn O ¿? Se
quedaria concluido. llacia esperar esto agitaban; y aun cuando no tenia el me
ANTONIO PEREZ. 39

nor conocimiento de que el rey supiese muerto en el camino á los pocos dias.
sus relaciones con la princesa de Ebo Continuaba Antonio Perez insis
tiendo en su demanda de retirarse,
li, observó en aquellos dias mas caute
porque sus enemigos, deseosos de dar
la en el trato que con ella tenia; y mo
vido sin duda por un instinto que le impulso á la acusacion de la muerte
de Escobedo, y al ver que el hijo ha
anunciaba los grandes peligros que iba
á correr, solicitó diversas veces de bia desistido, buscaron otro pariente,
aunque mas lejano, que redoblase sus
Felipe II el permiso de retirarse de la
córte y alejarse de la envidia de losinstancias y activase la acusacion. Al
COrteSanOS. mismo tiempo Mateo Vazquez propala
No convenia al rey este proyecto. ba cuanto podia por Madrid las rela
Quedaba en su corazon una duda, du ciones de los amores de Antonio Pe
da terrible, y le era necesario aclarar— rez y de la princesa de Eboli, refirien
la. O Antonio Perez le habia sido fiel, do los regalos que recibia Antonio Pe
en cuyo caso hubiera perdido un con rez, y el palco que tenia en los corrales
fidente difícil de reemplazar, porque de las comedias, donde se presentaban
era el hombre que habia nacido para solos.
ser el confidente de Felipe II, ó le ha Llegó la murmuracion á tanto, que
bia sido desleal, en cuyo caso escapa hasta los mismos criados de la prin
ba á su venganza. cesa se atrevian á hablar con menos
En la misma renuncia de Antonio consideracion y hasta con desprecio,
Perez encontró el genio suspicaz de tal vez porque creian no tenia ya el
Felipe II el medio de aclarar sus dudas afecto del rey, que hacia tiempo que
recelos. Escribió al cardenal de To— no la visitaba.
ie don Gaspar de Quiroga, para que La princesa de Eboli era una mu
en su nombre solicitase de la princesa ger tan bella como audaz; y al ver la
de Eboli que procurase de Antonio ofensa que recibia de algunas personas
Perez no insistiese en sus deseos de resolvió aventurarlo todo, y escribió
alejarse de la córte y dejar el ministe una carta al rey dándole sus quejas y
rio, ofreciendo colmarlos á ambos de pidiéndole una satisfaccion. Tal vez
hoñores y distinciones. era el último quejido de una muger
De este modo hacia preciso que se favorecida y acostumbrada á dominar
viesen Antonio Perez y la princesa; y á su amante en otro tiempo.
de estas frecuentes visitas debia re
sultar necesariamente el esclareci— «Señor, le decia, por haber manda
miento de la verdad para el rey, que do V. M. al cardenal de Toledo que me
estaba solícito y atento á investi hablase en estas cosas que han pasado
garla. de Antonio Perez para que yo procu
En este tiempo don Pedro Fajardo, rase reducirle, he entendido yo y tra
marqués de los Velez, grande de Espa tado de ello muy diferentemente de
ña, consejero de Estado, mayordomo lo que entienden : pues quedar un
mayor de la reina doña Ana de Aus hombre inocente despues de muchas
tria, empezó á caer en desgracia, tal persecuciones, sin honra ni sosiego,
vez á causa de la íntima amistad que no era cosa que á él podia estár bien
tenia con Antonio Perez, cuya fortuna ni nadie con razon persuadírselo: mas
se veia tan combatida. todo lo puede el servicio de V. M. Bien
Enfermo, disgustado de las intrigas se acordará V. M. que le he dicho en
de la córte, determinó retirarse á sus un papel que habia entendido que de
estados para disfrutar alli en paz los cian Mateo Vazquez y los suyos que
últimos dias de su vida, ó embarcarse perdian la gracia de V. M. los que en
para el Perú, abandonando todos los traban en mi casa. Despues de esto
oficios y cargos que poseia al lado de he sabido que han pasado mas adelan
su soberano. te, como á decir que Antonio Perez
Pérdida grande fué esta para Anto mató á Escobedo por mi respeto, y él
nio Perez, que tuvo el dolor de saber tiene tales obligaciones á mi casa, que
que su amigo, y uno de sus mas fuer cuando yo se lo pidiera estuviera obli
tes apoyos al lado del monarca, habia gado á hacerlo. Y habiendo llegado es
4.40 CAUSAS CELEBRES.

ta gente á tal, y estendídose á tanto darse sin satisfaccion. No irá mi per


su atrevimiento y desvergüenza, está sona para andar en tratos de amis
V. M como rey y caballero obligado á tad con personas tales que no los sufre
que la demostracion de esto sea tal la ofensa de que se trata.»
que se sepa y llegue á todos, y si V. M. Felipe II conocia bien que no era
no lo entendiere y quisiese aun la au fácil doblegar el ánimo de la altiva
toridad se pierda en esta casa, como princesa de Eboli.
la hacienda de mis abuelos, y la gra Dividida se hallaba la córte en dos
cia tan merescida del príncipe, y que partidos: el uno le componian los ami
sean estas las mercedes y recompen gos de Antonio Perez; los enemigos de
sas de sus servicios, con haber dicho éste se habian agrupado al rededor de
yo esto me habré descargado con V. M. Vazquez. Felipe II trató de reconciliar
de la satisfaccion que debo á quien por lo menos á estos dos entre sí, ya
soy, y suplico á V. M. me devuelva es— que no habia podido conseguirlo con la
te papel; ¿ lo que he dicho en él es princesa de Eboli.
como á caballero y en confianza de tal, Se habia exacerbado la enemistad
y en sentimiento de tal ofensa.» que se tenian estos dos secretarios por
un incidente que habia ocurrido en
Ademas se quejaba en esta misma aquel, entonces. Mateo Vazquez habia
carta de que un pleito que sostenia en introducido en la cartera de despacho
su nombre y en el de sus hijos no se de Antonio Perez, en los momentos en
despachaba y decia: que iba á dar cuenta á S. M. de los
«Aunque en esto se ha usado de buen negocios, un anónimo, diciendo entre
gobierno con otro, soy yo tan mohina otras cosas que Antonio Perez no po—
con V. M. y ha tomado de tal manera dia tener hábito de las Ordenes Mili
el desfavorecerme que la razon que da tares por no ser de buena casta. Tanto
el presidente, es decir, que el no ha irritó esto á Perez, que propuso al rey
cerse conmigo lo mismo, es porque matarle; pero Felipe II procuró tem
V. M. lo quiso asi.» plarle ofreciendo castigar severamente
Ninguna impresion hicieron en el á Vazquez.
ánimo del rey estas razones. Limitóse No es fácil comprender lo que el
únicamente á hacer que su confesor rey se proponia con estos manejos.
fra y Diego de Chaves hablase á la prin Sin duda era su objeto ganar tiempo y
cesa para que declarase los fundamen averiguar que era lo que habia de cier
tos de su queja. Esta se remitió á que to en las relaciones de Antonio Perez
el rey ya sabia la verdad, y no quiso con la princesa de Eboli.
entenderse con el fraile. Asi es que aun cuando ya se halla
Insistia la princesa quejándose á ba separado de los amores de esta her
Felipe II de la conducta y enemistad mosa jóven, todavía debian quedar en
que con ella observaba el secretario su corazon cenizas de aquel mal ápaga
Vazquez, y el rey contestaba de una do fuego, cuando muchas noches salia
manera ambigua sin decidirse ni á des por una puerta escusada de palacio
contentarla ni á satisfacerla completa acompañado de uno sus criados y embo
mente. Tenia sin embargo, el rey grande zado rondaba la casa de la princesa de
empeño en que se reconciliase la prince Eboli por la calle de la Almudena. En
sa con el secretario Vazquez, y para es una de aquellas noches vieron sus
to comisionó nuevamente á su confesor ojos de un modo indudable salir á des
fray Diego de Chaves, que como van hora de la noche á Antonio Perez de
viendo nuestros lectores era un instru la casa de la princesa. Ya no quedó
mento á propósito para todo en las ma duda al engañado amante de la con
nos de Felipe II. Estrellóse todo el es— ducta de su ministro. Veia en él un
fuerzo del confesor en la altiva firmeza rival; se representaba en su imagina
de la princesa de Eboli, que respondió: cion que aquel á quien habia hecho
«Yo he satisfecho al rey como sabe: mensagero de sus amores, faltando á
haga S.M. lo que bien visto le sea. su confianza, le habia vendido y hecho
Las quejas justas ó injustas no tie el amor á la princesa por cuenta
men otra pena de su natural sino que propia.
ANTONIO PEREZ, 4

Felipe II se retiró al amanecer á pa terada, á pesar del esmero con que


lacio, y mandó llamar á fray Diego de procuraba el rey que se le tratase. En
Chaves, que habia intervenido en todas tonces consintió Felipe II, á los cuatro
aquellas negociaciones. Informóse del meses de prision, que fuese traslada
estado en que se hallaba el negocio de do desde la casa del alcalde de córte á
la reconciliacion entre Antonio Perez la suya propia, que como hemos dicho,
y Mateo Vazquez; y llamando despues era la casa llamada del Cordon, ofre
al conde de Barajas, mayordomo mayor ciendo tenerla por cárcel.
de la reina, que habia entrado á sus Alli se le presentó á nombre del
tituir al marqués de los Velez, el gran rey el capitan de su guardia don Ro
de amigo de Antonio Perez, les comu drigo Manuel á pedirle que prestara
nicó la resolucion que habia tomado, pleito homenage de amistad con Mateo
encargándoles la inviolabilidad del se Vazquez y que ofreciese que ni él ni
creto. En efecto, el dia 28 de julio ninguno de su familia le haria daño en
de 1579, á las once de la noche, se ve tiempo alguno. Prestó esta caucion Pe
rificó la prision de Antonio Perez y de rez, que continuó arrestado en su casa
la princesa de Eboli, presenciando la con guardias de vista por espacio de
ejecucion de esta última el rey escon ocho meses, al cabo de los cuales le fué
dido en el portal de la iglesia de San permitido salir á misa y á paseo y re
ta María, como hemos dicho al comen cibir cuantas visitas quisiesen hacerle,
zar la relacion de esta causa. pero no hacerlas él.
Preso Antonio Perez, aunque por La princesa de Eboli, que como he
una causa al parecer tan liviana como mos dicho al principio, habia sido con
era no haberse querido reconciliar con ducida á la fortaleza de Pinto, fué pues
su enemigo el secretario Mateo Vaz— ta en libertad á los muy pocos dias.
quez, empezaron á agitarse los enemi Continuaba en su casa-arresto An
gos de Antonio Perez, bien que no des tonio Perez, despachando todos los ne
caradamente, porque todavía temian gocios de Estado, ocupándose en los
que pudiese volver al poder, y sobre asuntos públicos con los oficiales de
todo al ver con asombro que el minis secretaría, y reuniendo en su casa la
tro, aunque preso, continuaba encar— flor de la córte, desplegando el lujo
gado del despacho de todos los nego inusitado que tenia en su trato; pero
cios de esta inmensa monarquía. hombre previsor, y receloso siempre
No quedó en esto, sino que al dia del carácter del monarca con quien te
siguiente, el cardenal de Toledo, fué á nia que habérselas, preparó hábilmen
consolar á doña Juana Coello, esposa de te los medios para buscar en su dia la
Antonio Perez, á su misma casa, afligi salvacion en su pais. *,

da con aquel golpe imprevisto, y cuyo Aragonés, habia cuidado siempre


alcance no le era dado en los primeros de servir con grande empeño á los na
momentos calcular. El mismo confesor turales de aquel pais, y de cultivar
del rey, fray Diego de Chaves, fué en amistad con los principales y mas po
yiado por Felipe II á visitar á Perez en derosos señores de aquel reino, por
la casa del alcalde de córte, donde he si algun dia arreciaba la tormenta aco
mos dicho se hallaba arrestado; y gerse á sus leyes y escudarse con
aquel buen religioso, que tan entro— sus fueros. Era íntimo amigo del con
metido vemos en todos los negocios de de de Luna, hermano del duque de
política, en tono festivo y chancero, le Villahermosa, una persona de las mas
dijo al acercarse al preso ministro, que importantes de Aragon por su riqueza,
aquella enfermedad no seria de muerte. su nacimiento y su influencia. Don Juan
Era, sin embargo, Antonio Perez de Lanuza era el justicia mayor de
demasiado conocedor de las cosas del aquel reino, y habia venido áMadrid á
mundo, y sobre todo del carácter de Fe obtener del rey el permiso de , renun
lipe II, para no comprender lo crítico y ciar en su hijo su elevada magistratu—
arriesgado de su posicion, y sentia en ra. Queria conocer á Antonio Perez, de
su alma bastante orgullo para que no quien como valido y ministro influyen
le doliese la humillacion de su prision. te de Felipe II, se hablaba mucho en
Asi es que su salud en breve se vió al Aragon, de quien se hallaban orgullo
142 CAUSAS CELEBRES.
-
-

sos los aragoneses por haber nacido en contra cualesquiera fuerzas estrange
su suelo, y de quien, en fin, habia vis ras que entrasen en el reino en ofensa
to elogios de la legislacion de aquel suya, aun cuando fuese contra el mis
pais, en la correspondencia activa que mo rey, si en tal forma entrase.
seguia con el duque de Villahermosa. Este es el famoso fuero que san
Fué presentado por el conde de Luna cionó el rey don Pedro y que al pre
el justicia mayor á Perez, y éste le pro sentárselo á la firma, sacando su pu
metió apoyar su solicitud, mostrándo ñal, rasgó el privilegio haciéndose san
se orgulloso de poder hacer la amistad gre en la mano y diciendo:
de tan alta autoridad, á quien estaba «Tal fuero de poder elegir rey los
confiada la guarda de las venerandas y vasallos, sangre de rey habia de cos
antiguas leyes de su patria. tal".))
Aprovechó Antonio Perez hábil La historia por eso le apellidó don
mente las visitas del justicia Lanuza Pedro el del Puñal.
para hablar con entusiasmo de la in Pronto sintieron las córtes el valor
dependencia de sus paisanos y de las de esta concesion, y pronto la corona,
libertades de Aragon, y manifestó los ya sin temor, comenzó á dominar. La
mas vivos deseos de poder un dia, re union de Fernando V é Isabel I, el des
tirado del fausto y del brillo de la cór cubrimiento de un nuevo mundo, el
te, ir á terminar su vida en Aragon desarrollo de la nueva monarquía,
ambicionando el modesto título de di acrecentaron el principio monárquico
putado. y le dieron una preponderacion cada
Ponderaba la importancia del jus vez mayor por las grandes conquistas
ticia mayor, la autoridad que mante que en la Europa hicieron Cárlos I y
nia la balanza entre las prerogativas Felipe II, y con la derrota de las co
del soberano y los derechos del pue munidades de Castilla en Villalar, y el
blo; dejó insinuar cuidadosamente y abandono de esta causa por la nobleza,
en secreto que hacia tiempo que el rey con disgusto del pueblo. Representan
proyectaba suprimir aquella magistra do otra sociedad, otros derechos y otras
tura que coartaba el ejercicio de su costumbres, no podia acomodarse ni
poder absoluto, cuyo proyecto habia subsistir mucho tiempo la constitucion
podido paralizar. Prendado quedaba el aragonesa en los tiempos de Felipe II.
justicia al ver el entusiasmo con que Iban cayendo en desuso, pertenecian
ablaba de las leyes de su pais el mi casi á la historia, la mayor parte de
nistro aragonés, y quedaba tambien sus fueros é inmunidades, pero con
admirado de su despejo cuando algu servaban la mas antigua de las prero
nas veces delante de él iban á despa gativas aragonesas.
char los primeros oficiales de la secre El justicia mayor de Aragon era el
taría de Estado con Antonio Perez. guardador de los fueros y el protector
Admirábale la solicitud de su ra contra todas las injusticias que pudie
ciocinio y sus grandes conocimientos ran proceder de los agentes del mo
de la historia y de la legislacion de su narca; era el árbitro supremo de las
pais que, constituido el reino en inde diferencias entre el rey y los de Ara
pendencia desde la reconquista, con gon; sus sentencias eran inapelables
servó sus instituciones protegidas por é inamovible su cargo. Semejante po
el sumo pontífice y que tenian mas de der era incompatible con el del rey en
republicanas que de monárquicas. una monarquía absoluta. En los pleitos
En un principio el peligro comun de los aragoneses en su territorio era
y la buena fé de los súbditos hizo que nula la jurisdiccion real si acudian al
todos caminasen en paz y ejerciesen justicia, ante quien era parte el sobe
libremente sus funciones los poderes. rano; y sin mas que presentarse ó ma
El rey don Pedro obtuvo de las córtes nifestarse quedaban exentos de reco
la derogacion del fuero que les permi nocer la autoridad real. Este es el pri
tia quitar al rey que quebrantase los vilegio de la manifestacion que luego
fueros y elegir otro, y esto lo consiguió veremos hacer un principalísimo papel
á cambio de otras prerogativas, entre en el curso de este proceso.
otras, la de poder tomar las armas En el verano de 1580 habia mar
ANTONIO PEREZ. 143
-

chado Felipe II á tomar posesion del somete al vencedor. En la segunda don


trono de Portugal, que habia conquis Sancho de Avila bate en las márgenes
tado apoyando sus derechos como pa del Duero al prior de Ocrato, que tiene
riente del último rey don Sebastian. que huir y con pena salva su cabeza,
El rey don Sebastian, desoyendo los por la que ofrece ocho mil ducados
consejos que le da lleno de prudencia Felipe II, empero ningun portugués
Felipe II al negarle los auxilios que le quiso vender y entregar á su enemigo
pide en una entrevista que tiene en este desgraciado príncipe.
Guadalupe, marcha á Africa águerrear Felipe II habia ido, á tomar pose
contra los moros, donde muere en la sion de aquel reino, dejando en Ma
célebre batalla de Alcazarquivir tan drid á Antonio Perez que tanto le ha
desastrosa para los portugueses, y en bia ayudado en la parte política de la
la que ni pudo encontrarse su cuerpo, conquista de él, si bien preso, como
circunstancia de que no nos haríamos ministro entendiéndose con los conse
cargo sino hubiese dado lugar á otra jos de Madrid y con la córte de Lisboa.
célebre causa que escribiremos á con Siguió Antonio Perez desplegan
tinuacion de la presente. do el mismo fausto y lujo que por poco
Muerto el rey don Sebastian le su— tiempo antes habia moderado, conti
cede su tio el cardenal don Enrique; nuó comunicándose con la princesa,
poco despues de un reinado de un año recibiendo visitas y sin apercibirse de
muere sin designar su sucesor entre que sus enemigos insistian incansables
los diversos pretendientes á aquel tro trabajando en la obra de su perdicion.
no. Los principales eran Felipe II, la El presidente del consejo, Pazos, es
duquesa de Braganza, el ºde Sa cribia sin cesar al rey en favor del mi
boya y don Antonio, prior de Ocrato, nistro, mientras sus enemigos exage
nietos todos de Manuel el Grande, pa raban al rey su insolente lujo y sus
dre de Enrique. relaciones con la princesa, y el hijo
El derecho de primogenitura favo de Escobedo faltando á su palabra vol
recia á la duquesa de Braganza, pero via á reproducir su querclla y deman
las leyes de España daban en igual dar justicia por la muerte de su padre.
grado de parentesco la preferencia á Hallábase el rey perplejo, vacilante sin
los varones. El valor real de los títulos decidirse á nada, queriendo darle li
era de poca importancia en una cues bertad, y al mismo tiempo no resol
tion que debian decidir las armas. Fe viéndose á soltarle.
lipe II era el mas poderoso de los pre Decidióse al fin Felipe II, y en 1582
tendientes, y antes de la muerte de dió comision secreta al presidente del
Enrique había tomado sus medidas pa Consejo de Hacienda, Rodrigo Vazquez
ra asegurarse su sucesion. Bajo el pre de Arce, para que formase reservadísi
testo de invadir á Marruecos habia mamente un proceso á Antonio Perez,
juntado una poderosa escuadra y le examinando y oyendo las deposicio
vantado un numeroso ejército. nes de los testigos bajo palabra de si
Los portugueses, por aversion á la ilo.
dominacion española, proclamaron rey 9Comenzóse esta primera informa
en Lisboa á Antonio prior de Ocrato. cion en Lisboa en 30 de mayo y duró
Aunque el duque de Alba se hallaba hasta mediados de agosto.
en desgracia desterrado de la córte por Los testigos que declararon en ella
una intriga amorosa que habia tenido fueron ocho personas, todas de alta po
su hijo con una dama de la reina, Feli sicion pero reconocidamente enemigas .
e II lo colocó al frente del ejército que de Antonio Perez.
invadió el Portugal para hacer recono Fueron estos testigos Luis de Ohe
cer sus derechos. -
va, comisionado del gran duque de
El duque de Alba sofoca su resenti Florencia.
miento, y aunque encorbado con el pe Don Luis Gaytan, mayordomo del
so de los años conquista aquel reino. príncipe Alberto.
Dos batallas deciden de la suerte de El conde de Fuensalida.
este reino, en la primera manda en Don Pedro Velasco, capitan de la
persona el duque de Alba y Lisboa se Guardia Española.
144 CAUSAS CELEBRES.
=-e

Don Rodrigo de Castro, arzobispo formacion, arreció el ímpetu de los ene


de Sevilla. migos de Perez, abandonáronle todos;
Don Luis Enriquez, de la cámara solo tres personas no le volvieron la
del príncipe cardenal. espalda al amago de la nueva tormenta
Don Fernando Solís. que contra él se preparaba: el presi
Don Alfonso de Velasco, page del ente de Castilla Pazos, que continua
rey, hijo del capitan don Antonio Ve ba escribiendo, aunque tímidamente,
lasco. en su favor al rey, don Gaspar de Qui
Estos testigos, escogidos no dieron roga, que procuraba conciliarle el apo
ninguna luz sobre el asunto principal, yo del clero, y su resentida muger do
sobre el objeto ostensible por que se ña Juana Coello, que olvidando sus
hacia la informacion, nada sabian, na agravios, solo veia en él el padre de
da pudieron decir sobre el asesinato sus hijos, y olvidaba con sublime ab
de Escobedo, empero formularon car— negacion sus adúlteras relaciones.
gos gravísimos contra Perez. Revela A pesar de esto, no se le estrechó
ron que el ministro comerciaba escan su prision, continuó Antonio Perez en
dalosamente con el poder, que vendia su arresto puramente nominal. Aquel
la confianza del monarca, que se hacia monarca tan severo, tan rígido en las
pagar muy caro el empleo de su in costumbres, cuya penetrante mirada
fluencia, que don Juan de Austria, An escudriñaba hasta lo que pasaba en lo
drea Doria, los príncipes y vireyes de mas oculto del hogar doméstico, sabia
Italia le hacian costosos regalos, y le de antiguo la conducta de su ministro,
contribuian anualmente con crecidas conocia su lujo, tan contrario á su par
sumas para que los mantuviese en simonia, y su vida licenciosa, y sin
sus gobiernos y vireinatos, que hasta embargo, por muchos años le ia
los pretendientes preferian mas bien concedido su favor; ahora la veia con
gastar en regalos al ministro lo que signada por testigos de la mas elevada
habian de gastar por su larga estancia categoría, y nada resolvia, y ni aun se
en la córte á trueque de ser pronto y agravaba su prision.
bien despachados; que hijo de un pa Terribles lazos debian ligar al mo
dre pobre, era opulentísima su fortu narca y al ministro cuando toleraba
na, superior á la de los grandes mas aquel cosas tan en contradiccion con
ricos de España: mantenia en su casa su carácter grave, severo, y fanática
un fausto casi real, tenia una lindísi mente religioso.
ma y perfectamente alhajada, casa de Pasaban los dias, pasaban los me
campo al estilo de las vilas de Italia, ses, y aunque sin agravarse la prision,
poseia galerías de pinturas formadas permanecia Antonio Perez en una po—
con preciosos cuadros regalados, sus sicion equívoca, en que si bien el po
cuadras tenian treinta caballos, su ca der continuaba en parte en sus manos,
sa era en lujo un palacio, con multitud aparecia como culpable á los ojos del
de pages y criados á su servicio, co pueblo y recluido en una prision.
ches, carrozas, literas, y no bajaba el Asi es que envió á Lisboa al jesuita
gasto anual de su casa de ciento cua padre Rengifo, que era muy amigo su
renta mil doblones. yo, con el objeto de que adoptase el rey
Acusábanle de tener ademas de las una resolución cualquiera, poniendo
relaciones escandalosas con la princesa término á una situacion tan singular y
de Eboli, de quien recibia hasta acémi tan anómala.
las cargadas de plata, frecuentes orgíasNada contestó el rey á esta apre
en su casa, en la que habia juego á miante mision. Vanos fueron los es-.
que asistian el almirante de Casti fuerzos que para conseguirlo intentó el
lla, el marqués de Auñon y otras per celoso jesuita.
sonas de las mas elevadas de la córte, Entonces Antonio Perez determinó
y concluian, si bien no dando pruebas, que marchase su muger, doña Juana
con que se atribuia á Perez y á la Coello, á verse con el rey; y esta espo
rincesa de Eboli la muerte de Esco— sa, ejemplo de abnegación y de virtud,
edo. emprendió aquel largo camino desa
Al transpirarse el resultado de la in fiando todos los peligros consiguientes
ANTONIO PEREZ. 43

á él, y los disgustos de su situacion. Salazar, del Consejo de la Inquisicion,


Al llegar á Aldea Gallega, el alcal ¿ general de Cruzada, nom
de Tejada la arrestó é impidió conti rando por escribano á Antonio Mar—
nuar su viage, examinándola ademas quez, el mismo que actuaba en el pro
detenidamente sobre las instrucciones ceso formado por Rodrigo Vazquez con
que llevaba. tra el secretario de Estado.
Creia el alcalde hacer un gran ser— En esta clase de juicios de residen
vicio al rey, y escediéndose en su co— cia se procedia de una manera inqui
mision, arrancó los papeles que lleva sitorial; no se daba traslado del pro
ba la desgraciada esposa del ministro ceso al residenciado, ni se le comuni
proscripto para enterarse de las ins eaban los nombres de los testigos. Asi
trucciones que le habia comunicado su es que resultaron grandes cargos con
marido. tra Antonio Perez, principalmente el
Ufano, creyendo obtener una gran de haber recibido cuantiosas dádivas
recompensa de Felipe II, se le presentó de don Juan de Austria, del cardenal
el ¿ con las diligencias que habia arzobispo de Toledo, de los vireyes y
formado para examinar á la desgracia capitanes de Italia; el de haber descu
da doña Juana; pero fijando sus ojos el bierto los secretos diplomáticos pro
sombrío monarca en alcalde, cual si pios de su oficio, y el de haber hecho
quisiese con ellos penetrar hasta el alteraciones, adiciones y supresiones
fondo de su alma, le cogió los papeles en los documentos que venian en cifra,
sin hablar una palabra, y sin volver el habiendo alterado tambien muchos pe
rostro, los arrojó en el fuego de una ríodos de la correspondencia que ha
chimenea que ardia en su régia estan bia mediado entre don Juan Escobe
cia. Volvióle despues la espalda, dejan do y él, como secretarios respectivos
do al alcalde trémulo y espantado de de don Juan de Austria y de Feli
tan fria acogida. pe II.
Inmediatamente el rey hizo llamar Cargos se hacian aqui á que le era
al padre Rengifo, y le mandó que fue muy fácil contestar á Antonio Perez;
se de su parte á tranquilizará doña porque si alteraba algunas comunica
Juana, que seguia arrestada en Aldea ciones, si al reducir y traducir las ci
Gallega, mandándola que volviese á fras de los despachos diplomáticos los
Madrid, y prometiéndola que á su re modificaba, era efecto de que asi se lo
greso á esta capital resolveria definiti prevenia el mismo rey; y esta autori
vamente sobre los negocios de su ma zacion era una cosa comun, ordinaria
rido. en la marcha que llevaban los nego
Continuaban las maquinaciones de cios en aquella época. Los diversos
los contrarios de Antonio Perez. Apo— consejos establecidos para la consulta
yábanse en los testimonios secretos de los negocios entendian en el despa
de la primera informacion, y sin in cho de todos ellos y remitian al rey su
sistir, porque no lo creian convenien parecer, el cual ponia por su mano
te á causa de poderse herir la suscep anotaba al márgen de las consultas,
tibilidad del monarca, en las relacio párrafo por párrafo su resolucion.
nes amorosas de Perez y de la prince Los negocios relativos á la hacien
sa, hicieron fijar su atencion sobre las da, á la justicia, á la gobernacion in
concusiones de que le acusaban los terior del reino, se remitian ordina
testigos. Entonces se dió un nuevo gi riamente íntegros para la discusion de
ro á esta causa. los consejos; empero de las notas re
Acostumbrábase á hacer de vez en servadas de los embajadores, de las
cuando en aquella época la visita de comunicaciones importantísimas de los
residencia en las secretarías y tribu vireyes, de los partes de los generales
nales para averiguar el comportamien en que se hablaba de las operaciones
to de los empleados públicos en el ejer de guerra, de los futuros planes de
cicio de sus funciones; y el rey, en conquista mandaba el rey suprimir la
enero de 1585 mandó hacer una visita parte que debia de quedar secreta y
á todas las secretarías del despacho, no era propia del exámen de aquellos
dando esta comision á don Tomás de cuerpos y en que nº º un interés
9
146 - CAUSAS CELEBRES.

grande del Estado en que no se traspi jueces de la visita, como era la cos
a Sen. tumbre general, solo se dió un auto
Antonio Perez tenia á su cargo el del visitador Salazar, refiriéndose á
hacer estas modificaciones, y de acuer ellos, mandándoselo notificar, aunque
do con Felipe II alteró muchas veces sin entregarle copia, como pretendió y
la notas que creian ambos no poder pidió diversas veces.
presentarse íntegras. . . Dictada esta sentencia contra toda
Tambien en las comunicaciones que ley, faltándose hasta á las fórmulas
habian mediado entre don Juan de mas esenciales para su validez, se pro
Austria y Antonio Perez, estaba éste cedió á su cumplimiento el 20 de ene
¿do or aquel para suprimir, al ro de 1585. Los alcaldes de casa y cór
leerlos, ¿ párrafos que, de te García de Toledo, que ya anterior
masiado conocedor del carácter de Fe mente le habia preso, y Espinosa, se
lipe II, pudiese creer que habian de presentaron en la casa de Antonio Pe
ser perjudiciales á los intereses de don rez, llamada la casa del Cordon.
Juan de Austria, de quien se tenia por Hallábase Antonio Perez tranquilo,
muy amigo. Verdad es que en estas sosegado, conversando con su esposa
comunicaciones con don Juan de Aus doña Juana. Mientras uno de los alcal
tria y su secretario don Juan de Esco des ocupaba con minucioso afan todos
bedo, Antonio Perez hizo un juego do sus papeles, el otro le notificaba su
ble, porque aun de aquellos mismos sentencia.
párrafos que, aparentando servir , á Antonio Perez, sin inmutarse, con
don Juan de Austria, suprimia, daba la mayor tranquilidad; recibiéndolos
exacta y detallada cuenta al rey. con aquella gallarda cortesanía que dis
Tambien resultó de la visita haber tinguia sus modales, sin que ninguno y
recibido del gran duque de Toscana de los alcaldes se apercibiese habló un
diez mil escudos á título de derecho momento con un criado. Salió éste, y
por el despacho de la investidura de volvió pocos instantes despues.
Sena; pero esta cantidad se la habia Aquel criado, mozo listo, en quien
regalado Francisco de Médicis, como tenia gran confianza, fué enviado á ver
derecho de costumbre á los secretarios
al cardenal de Toledo, cuyo palacio se
de Estado desde el tiempo de los re hallaba situado junto á su casa, para
es Católicos, es decir, que debian re e un consejo de lo que debia
cibir la mitad de lo que pagaban por el a Celº. -

derecho de investidura, entregando lo Mientras Antonio Perez entretenia


restante á la cámara del rey, al alcalde con corteses cumplimientos,
Antonio Perez se dirigió al rey al se presentó de vuelta el criado á la
verse abandonado y en manos de sus puerta de la estancia en que se encon
enemigos; pero el confesor del rey, el traban. Una ligera seña, que nadie pu
padre Chaves, cuya intervencion tan do percibir, que solo comprendió Án
directa vemos en todos estos negocios, tonio Perez, le significó la aprobacion
era tambien uno de los jueces de la de lo consultado.
visita, y le aconsejó que no se discul Entonces pasa acompañado del al
ase de aquellos cargos que contra él calde, siempre á su vista, á una pieza
¿ porque no seria condenado ni inmediata. Tenia ésta una ventana de
en un par de guantes; por lo cual An mediana elevacion que caia á San Jus
tonio Perez se limitó únicamente á dar to: fué como para mirar, y mas rápido
descargos generales. -
de lo que puede tardarse en referir el
A pesar de esta promesa fué conde hecho, se arrojó por la ventana que
nado en suspension de oficio por diez daba al atrio de la iglesia. -

años, en dos de reclusion en una for Asombrados quedaron los alcaldes,


taleza, en ocho de destierro de la cór comenzaron á dar grandes gritos, no
te del rey, y en treinta mil ducados de atreviéndose á acompañarle en su pe
multa é indemnizacion. ligroso salto. Salieron inmediatamente
No se observaron en la causa las dando voces, acudieron con gente á la
formalidades debidas. En lugar de dar iglesia; empero en el corto tiempo que
se su sentencia firmada por todos los habian tardado en bajará la calle ya se
ANTONIO PEREZ. 147
-

hallaban cerradas las puertas de aque Apeló el fiscal, y se pidió entretanto


lla. Dieron sobre ellas golpes los al la escomunion contra los alcaldes por
caldes y las puertas no se abrieron. los grillos que le habian puesto, y el 14
Entonces las derribaron con palancas; de febrero pronunció sentencia el vi
entraron en el templo; registraron es cario mandando que se le restituyese
crupulosamente todos, los rincones y á la iglesia. El fiscal del rey interpuso
los altares, bajaron á la bóveda, y en su apelacion ante el Consejo enta
ninguna parte hallaron á Antonio Pe blando el recurso de fuerza.
rez, hasta que subiendo uno de los de Los autos entretanto, fueron lleva
pendientes de justicia á los desvanes dos al tribunal de la nunciatura, que
del tejado lo encontró escondido en confirmó la sentencia del vicario; y
uno de ellos. este negocio, que parecia marchar con
Apoderáronse de él; metiéronle en tanta actividad, queda, por una de
un coche que tenian prevenido, y lo esas circunstancias que vemos tan re
enviaron á la fortaleza de Turuégano á petidas en esta célebre causa, como
cumplir su condena. paralizado hasta el año 1589 en que se
Vemos, pues, que en esta nueva llevó al Consejo la apelacion del fiscal
faz que va tomando el proceso de An que declaró la fuerza en conocer, anu
tonio Perez, el auto de su prision se lando lo hecho, alzando las censuras
refiere solo á las concusiones cometi impuestas, absolviendo á los notifica
das como ministro de Felipe II, y al dos y haciendo salir á los jueces del
abuso de su poder, y ni una sola pala nuncio de Madrid y del reino en el
bra se indica del asesinato del secre término de segundo dia.
tario Escobedo. Mientras que tenia lugar este epi
Encerrado sin comunicacion en el sodio del proceso, episodio que habia
castillo de Turuégano, embargados y durado nada menos que cuatro años,
mal vendidos parte de sus bienes, su el rey Felipe II habia tenido que ir,
muger fué ¿ con sus hijos cons pocos meses despues de la extradicion
tituida en prision. El arzobispo de To de Antonio Perez de la iglesia de San
ledo no le abandonó, sin embargo, en Justo, á Aragon para celebrar córtes,
este apuro; hizo, aunque tibiamente y marchó acompañado de Rodrigo Vaz
que el clero se pronunciase en su fa quez, presidente del consejo de Ha
vor. Asi es que el 30 del mismo mes cienda y juez de la causa. En esta es
denunció el fiscal eclesiástico ante el pedicion recibió el rey en Lérida una
doctor Noroni, vicario general, la vio esposicion de Antonio Enriquez ofre
lacion del templo de San Justo, y se ciendo declarar cuanto sabia del asesi
entabló una gran competencia entre nato de Escobedo, empero pidiendo un
las autoridades eclesiástica y civil, salvoconducto que le pusiese á cubieto
disputa de jurisdiccion que duró largo de toda persecucion. Manifestaba que
tiempo, bien que el vicario despació no era el interés, que era la venganza
cartas de censura contra los alcaldes la que le impulsaba á dar aquel paso,
de córte si no volvian al dia siguiente porque tenia fundadas sospechas de
á San Justo al preso que habian sacado que Antonio Perez habia hecho atosi
de alli con manifiesta violacion del de gar á un hermano suyo.
recho de asilo y profanando el templo. Tambien llegó alli otra esposicion
Los alcaldes contestaron protes del capitan don Pedro Quintana, so
tando de la fuerza que se les hacia y brino de Escobedo, el que, habiendo
negándose á reconocer el derecho de podido rastrear en uno de los barrios
inmunidad en el delito de que se bajos de Madrid que habia un hombre
trataba. Aparte de que Antonio Perez que habia intervenido en el asesinato
contestó pidiendo de que se procedie de su tio y se habia marchado al es
se á la imposicion de las censuras si no trangero, recorrió varios paises en su
se le volvia al lugar sagrado. busca, y al fin habia podido encontrar
El fiscal de la jurisdiccion real pi al alférez Enriquez en Zaragoza y po
dió la reposicion de aprobado. Se ad dido reducirle á que acusase á Anto
mitió por el tribunal eclesiástico el nio Perez y diese las pruebas de su
negocio á prueba por breve término. crimen.
e
9.
l 8 CAUSAS CELEDRES.
--->

El presidente del consejo de la to examinó á otro testigo llamado Ge


cienda, Rodrigo Vazquez, recibió de rónimo Diez, que se estendió larga
Antonio Enriquez el 30 de julio la de mente en su declaracion refiriendo
claracion que habia ofrecido. Entonces cuanto habia oido de las relaciones del
es cuando por la vez primera se des secretario Antonio Perez con la prim
cubrieron todas las circunstancias y cesa de Eboli y lo que de ello hablaba
todos los cómplices del crímen en que el secretario Escobedo, atribuyendo á
se hallaba comprometido Antonio Pe eSt O Su muerte.
rez y que habia sido ejecutado por el En la ciudad de Tortosa fué tam
mandato del mismo rey. Se mandó en bien llamado á declarar el 11 de se
tonces la prision de biº, Martinez, tiembre, Martin Gutierrez, vecino del
mayordomo de Antonio Perez. lugar de Molina, paisano de Juan de
Durante este tiempo existian en Mesa, el cual contó particularidades
poder del secretario de Estado la cor de las salidas y entradas de éste al
respondencia que habia mediado en tiempo de la muerte del secretario Es
este asunto con el rey y la de otros cobedo. . -

muchos negocios gravísimos. El rey Veia Antonio Perez que la situacion


trataba de arrancárselas, é hizo que el se iba complicando y que de la prision
confesor, el indispensable padre Cha de su mayordomo Martinez podia re
ves, se la exigiese á la muger de Pe sultar un giro muy perjudicial para el
rez. En vano el buen religioso apeló á proceso, y entonces trató de evadirse
las súplicas y á las promesas; en vano de la cárcel y fugarse á Aragon, para
usó tambien de amenazas agenas á su lo cual se habia preparado y enviádole
sagrado ministerio; todo fué en vano. de aquel pais dos yeguas herradas al
Aquella muger mostró una fortale revés. Descubierto el plan de su fuga,
za superior á su sexo, y se negó á to- quedó frustrado, y su prision se hizo
do; hasta que Perez, sabedor de las mas severa y estrecha.
persecuciones que sufria, y temeroso Respiró el rey al saber que los pa
de que se abandonasen con ella á los peles que tenia Antonio Perez habian
mayores escesos, escribió con su san- sido entregados por su esposa doña
gre á falta de tinta é hizo llegar á su Juana Coello. No sabia aquel astuto
mano una carta, previniéndola entre-monarca que tenia que habérselas con
gase dos arcas de papeles importantes un hombre del temple de su secretario
ue tenia en su poder. Entonces, obe que habia aprendido mucho con su tra
iente doña Juana Coello, los envió á to en el disimulo. El rey creyó que
Monzon con persona segura al confesor quedaba Antonio Perez desprovisto de
del rey. En seguida ella y sus hijos sa los medios de probar que en la muer
lieron inmediatamente de la cárcel, te de Escobedo habia obrado por su
recibiendo de fray Diego de Chaves órden. No calculó que mucho tiempo
las seguridades mas completas de antes, con una prevision singular, hu
¿ á costa de su vida aquellos biese reservado algunos billetes, los
OcumentOS. bastantes para que en su dia le sirvie
Antonio Perez era demasiado há sen de descargo y pudiesen causar te
bil. Al entregar aquellos papeles, que mor al rey.
evitaban la persecucion y devolvian la A esta seguridad que tenia Feli
libertad á su inocente familia, como pe II se debió sin duda que á su vuel
previsor y suspicaz habia reservado en ta de Aragon oyese con mas benigni
secreto papeles de grande importan— dad las súplicas y memoriales de su
cia, papeles que debian un dia servir antiguo secretario de Estado, en que
le poderosamente en el proceso de Za recordaba los grandes servicios que le
ragoza y obligar al rey á desistir de su habia prestado en otro tiempo, y le
empeño teniéndole en una continua permitiese venir desde la fortaleza de
alarma y zozobra. Turuégano á la córte, dándole por cár
Rodrigo Vazquez en tanto conti cel la casa de don Benito de Cisneros.
nuaba examinando , cuantos testigos Alli volvió á gozar, con grande estra
podian corroborar la relacion hecha ñeza de todos, de cierta libertad; alli
por el alférez Enriquez. El 11 de agos le visitaba toda la grandeza, el cuerpo
º.
ANTONIO PEREZ 40

diplomático, los ministros de Estado, cándolo á las partes. Se procedió á un


los consejos y tribunales; y hubo has minucioso registro en la casa que ocu
ta momentos en que, al ver el curso paba Antonio Perez, y se redobló la
tan raro y estraordinario de este pro vigilancia colocando mayor número de
ceso, muchas personas creyeron que alguaciles de centinelas de vista.
volveria al poder. Llegó la Semana Presentaron para que las recono
Santa, y Antonio Perez pidió licencia ciese las cartas que habia escrito al
rey recomendando á su mayordomo
al rey para salir á los Oficios Divinos.
Le fué concedida, y la córte vió á An Martinez, y pidiendo la pronta termi
tonio Perez pasear libremente por las nacion de aquella causa; cartas que,
calles. -

como hemos visto, el rey entregaba á


Gran cuidado, sin embargo, tenia Rodrigo Vazquez, y que se unian á la
Antonio Perez por la prision de su ma causa. Antonio Perez negó con la ma
yordomo Diego Martinez, y por los trá yor imperturbabilidad su firma.
mites que se siguieron en el proceso. Recibióse despues el negocio á
Negaba, no obstante, el mayordomo prueba por término de diez dias, con
todos los cargos, y Antonio Perez es cargos de peticion y de castigo. Se
cribió diferentes veces al rey en su fa procedió dentro de este mismo térmi
vor, pidiéndole encarecidamente abre no á la ratificacion de los testigos del
viase el fallo de la causa, poniendo sumario, y el 31 de agosto presentó en
término á tantos disgustos. El rey, en forma su defensa Antonio Perez, soli
vez de atender á sus súplicas, entre citando que con arreglo á derecho se
gaba sus cartas al confesor, y éste al le absolviese de la instancia por no ha
juez, que las mandaba unir al proceso. ber pruebas suficientes para su conde
No quedaba, pues, ya duda de que la nacion.
intencion del rey era perderle. Sin Hasta ahora se habia seguido en
embargo, nada resultaba probado del un todo la tramitacion y procedimien
delito. tos marcados por el derecho, empero
El 20 de febrero de 1587 volvió An aqui se da ya un nuevo giro á esta
tonio Perez á escribir al rey con mayor causa singular, mandando el juez que
calor, y su carta fué tambien á unirse en este proceso, que habia empezado
al proceso. Ni en la declaracion, con de oficio, se diese traslado á Pedro
fesion y careo con Enriquez, descubrió Escobedo.
Martinez nada. De esta manera se obligaba en cier
El sistema adoptado por Perez era to modo á un hombre que ya se habia
un sistema hábil por la serenidad y separado de su querella, y habia com
firmeza con que le siguió: negaba to prometido su palabra de no figurar en
dos los cargos, desconocia sus propias el proceso como parte, á que la repro
cartas que le presentaba el juez, y que dujese. Aunque retraido por la ante
habia escrito al rey. rior promesa que habia hecho al res
Del sumario no resultaba proba petable presidente del Consejo de Cas
do delito alguno; el alférez Enriquez tilla, fueron tantos y tan poderosos los
era un delator en causa propia, y sus enemigos de Antonio Perez, que qui
crímenes le incapacitaban para hacer sieron reanudar por este medio el pro
fé en juicio, y el secretario de Estado ceso que veian iba á terminar, que ol
no podia ser convicto de la muerte de vidado de su palabra, faltando á sus
Escobedo. anteriores compromisos, Pedro Escobe
-

Antonio Perez y su esposa contes do, en 12 de setiembre contestando


taron acordes, y en absoluta negativa, al traslado que se le habia pasado de
en la confesion que se les tomó el 30 la causa de oficio, presentó en forma
de julio de 1579. Despues se volvió á su querella.
tomar , otra declaracion supletoria en No deseaban mas los contrarios
el 15 de agosto, en la que Antonio Pe encarnizados de Antonio Perez, y asi
rez estuvo enteramente conforme con es que con sorpresa general de todos
lo que antes habia dicho. fué estraido de la casa en donde se
En el dia 25 se le dió traslado de hallaba preso y conducido á la fortale
cuanto resultaba en el proceso, notifi za de Pinto.
450 CAUSAS CELEBRES.

A muy pocos dias de esta prision, declaraciones dadas el 7 de setiembre


mandó el rey que se le volviese á la de 1589 aseguran que al tiempo de
córte. Los enemigos de Perez que veian la muerte se hallaba Antonio Pérez en
en este paso que se les escapaba el éxito Alcalá de Henares con el marqués de
que se habian propuesto en el nuevo los Velez, espresando sus sospechas
giro que se habia dado á esta causa, de que Antonio Enriquez, su delator,
representaron diversas veces al mo estuviese sobornado por la familia de
narca; le hicieron ver la inconvenien los Escobedos, hallándose resentido
cia de su traslacion á la córte; y opo—de que Diego Martinez con consenti
niendo obstáculo sobre obstáculo lo— miento de su amo habia hecho atosigar
graron dilatar por espacio de dos me á su hermano.
ses y medio el cumplimiento de esta En tal estado se hallaba la causa,
resolucion, hasta que firme el rey en cuando Pedro de Escobedo pidió sus
su propósito lo hizo venir á Madrid, y pension del negocio para ir á buscar
colocarle en una casa principal por al boticario que dió el agua emponzo
prision. ñada, en una de las comidas á que
El juez de la causa, Rodrigo Vaz asistia en casa de Antonio Perez, á Es
quez, era un enemigo personal, decla cobedo, y tambien para ir á buscar al
rado, decidido, de Antonio Perez. Asi alférez Juan Rubio, cuyo paradero,
es, que se lamentaba muchas veces, aunque confusamente habia podido
cuando el rey le iba á la mano conte traslucir, y el que, como han visto
niéndole en los procedimientos que nuestros lectores, habia recibido un
intentaba contra Antonio Perez. despacho de alférez é ídose á servirlo
, , Recibia éste de contínuo de parte en Milan.
del confesor del rey, que tambien era Alarmaba á Antonio Perez este tor
enemigo suyo, las seguridades y espe cido curso que iba dándose á su pro
ranzas de que aquel proceso, que ya ceso. Veia que se caminaba en él con
contaba tantos años, no pasaria ade mas precipitacion que lo que se habia
lante. hecho en los años anteriores, y asi es
Preguntándole una vez uno de los cribió diversas veces al rey manifes
señores mas principales á Rodrigo Vaz tándole los grandes inconvenientes que
quez sobre las anomalías que presen traia el conducir el proceso á punto de
taba aquel proceso, consta que le con que se viese forzado á decir la verdad.
testó: Estas cartas eran, como las anteriores,
«¿Qué quereis que os diga? Unas inmediatamente entregadas al juez de
veces me da priesa el rey y me alarga la causa y unidas á los autos.
la mano; otras espacio, y me la enco Hay mas: el rey hizo que su confe
ge. No lo entiendo, ni alcanzo los mis sor, fray Diego de Chaves, escribiese á
terios y las prendas que hay entre el Antonio Perez dos cartas. En la una de
rey y el vasallo.» -
ellas le decia:
En otra ocasion tambien el arzo
bispo de Toledo, Quiroga, hablando «Señor: habiendo entendido los
con el padre Chaves ¿r del rey, grandes trabajos de su merced y de su
le decia: casa, tiempo ha he andado, pensando
«Señor, ó yo soy loco, ó este nego conmigo, que era bien por lo que la
cio es loco. Si el rey mandó á Antonio caridad pide, dar consejo á quien , no
Perez que hiciese matar á Escobedo, lo pide. En fin, me he resuelto á ha
¿qué cuentas le pide, ni qué cosas? Mi cerlo; y asi le digo que pues vuesa
merced en realidad de verdad tiene
ráralo, y entonces él lo viera.»
Antonio Perez contestó á la quere— escusa perentoria en este hecho, cuan
lla con una prueba robusta, con una do se venga á saber, que vuesa merced
informacion de seis testigos, que fue deberia de confesar de plano lo que se
ron don Diego Bustamante, Antonio le pide, y con esto se quita, á mi jui
Martinez, Claudio Vara, Juan de Vega, cio, de todos los trabajos que tiene,
el alférez Gil de Mesa, y Luis Juan de ¿ el fundamento de todos ellos es y
Orihuela, contador del rey y escribano a sido esto, que cada uno responda
del consejo de Aragon; los que en sus por sí.»
N,
ANTONIO PEREZ. 15
- =º

El padre Chaves era enemigo de de ello, que á esta no se llega en ma


Antonio Perez, no personalmente, sino teria alguna. »
por ese espíritu exagerado de concien
cia con que el buen hombre era el ju— Ya ven nuestros lectores la singu
guete de Felipe II, en todos los nego— lar jurisprudencia del confesor de ¿
cios en que le hacia entrar: creia que lipe II, del hombre á quien se vió in
su augusto penitente no tenia el menor tervenir en su reinado en todos los ne
antecedente de la muerte de Escobedo, gocios.
y que era todo obra de Antonio Perez; Antonio Perez conoció que el con
y tambien porque queria servir y com sejo del confesor era un lazo que se le
placer al monarca en todo cuanto se tendia, puesto que todos los esfuerzos
le antojase. se dirigian á que se declarase por autor
Antonio Perez vió en la correspon del asesinato, y que una vez confesado
dencia que con él entablaba el confe el hecho, falto de las cartas en que el
sor de órden del rey un nuevo lazo. rey asi se lo mandaba, por creer el rey
Consultó, pues, con el cardenal Qui haberlas recogido antes en los baules
roga, que era su amigo verdadero, y de papeles que envió su esposa doña
respondió con acuerdo de éste en una Juana Coello á Monzon, se quedaba in
carta sumamente hábil, manifestándo defenso y sin escudo alguno para resis
le los peligros que se seguirian al ser tir los golpes de sus enemigos.
vicio y al buen nombre del rey de se Prefirió, pues, entonces entrar en
mejante declaracion, manifestándole negociaciones de transaccion con el
que ni su conciencia le permitia conde hijo de Escobedo, que intimidado por
narse en caso tan grave sin probanzas un fuerte anónimo que habia recibido,
de valor, alcanzando á sus hijos las re consintió en separarse de la causa me
sultas, ni por su afecto al rey podia diante una suma de 10,000 ducados,
prestar la peligrosa declaracion á que haciéndole una formal y solemne escri
él le escitaba cuando habia prometido tura de desistimiento en 28 de setiem
solemnemente lo contrario á ruegos bre de 1589, en la que, despues de la
del rey, no debiendo mezclar nunca su firma de los contrayentes, concurrie
nombre augusto en esta causa; estando ron como testigos el almirante de Cas
ademas pronto á transigir el negocio tilla don Luis Enrique de Cabrera, du
con Escobedo por medio de un con que de Medina de Rioseco, conde de
cierto pecuniario. Módica; don Diego Zapata, comendador
El padre Chaves contestó á esta de Montealegre en la órden de Santia
carta insistiendo en su primera opi go; don Alonso del Campo, y Jácome
nion, exhortándole á que dijese de pla Marengo.
no lisa y llanamente la verdad del he Como Antonio Perez tenia embar
cho; que esta seria la manera de li gados todos sus bienes, como carecia
brarse de una vez de prisiones, des enteramente de recursos propios, el
cargándole de toda culpa, y añadia: rey pagó por él esta crecida cantidad.
Presentada esta escritura de desis
«Puesto que no la tiene el vasallo timiento ante el juez Rodrigo Vazquez,
que mata á otro hombre de órden de pidiendo al mismo tiempo el sobresei
su rey, que como dueño de las vidas miento de la causa, mediante á haber
de sus súbditos, puede quitárselas con retirado su demanda la parte ofendida,
juicio formädo, ó de otro modo, estan mandó el juez que se diese traslado á
do en su mano dispensar los trámites Pedro de Escobedo, para que se ratifi
judiciales; y se ha de pensar siempre case en la escritura aprobándola nue
¿ lo mandó con causa justa, como el vamente, y asi fué.
erecho presupone; y asi con decir la Pareció por un momento que habia
verdad se acaba el negocio, y habrá concluido este estraño proceso; empe
S. M. satisfecho á Escobedo....... Y si ro los enemigos de Antonio Perez, á
él quisiere convertir contra S. M. se le cuya cabeza se hallaba su juez Rodrigo
ordenará que calle y salga de la córte; Vazquez, encontraron el medio de dar
agradezca, como que mas se pudiera le una nueva faz; y asi, cuando lo que
ha¿ contra él sin declararle la causa procedia, segun derecho, era que An
152 CAUSAS CELEBRES.

tonio Perez fuese declarado libre de habia burlado la perfidia de su sobe


toda culpa y de toda pena, Rodrigo "l 10.

Vazquez se presentó al rey; le hizo verEn vano el arzobispo de Toledo lle


que su fama quedaria empañada, com ga hasta indisponerse con el confesor
prometido su nombre aun para la pos del rey por interceder en favor del
teridad, si no se llevaba adelante cl desgraciado Perez: el nuncio de Su
proceso contra Antonio Perez, porque Santidad, en valde tambien se aboca y
éste se habia dejado decir y dado á empeña con el inflexible Vazquez: na
entender de un modo terminante que da pudieron, pues, ni las súplicas del
del asesinato de Escobedo habia sido primado de las Españas, ni los buenos
solo él el instrumento, habiendo pro oficios del representante de Sisto V.
cedido de completo acuerdo y con ór Incomunicado estrechamente, cer—
denes del rey; que de consiguiente cado de alguaciles á quienes se habia
convenia al decoro de la magestad y al impuesto la pena de muerte si deja
buen nombre del rey el que se apura ban que alguien hablase con el preso,
sen aquellas causas. permaneció éste desde el mes de se—
Con gran disgusto recibio el rey tiembre en que se dictó el auto de que
don Felipe II las razones del presiden acabamos de hablar, hasta el dia 11 de
te, pero no pudo menos de asentir enero del año siguiente de 1590, en
á lo que le proponia el juez; y éste, que presentándose en su prisiou á to
ara investigar las causas que dieron marle declaracion Rodrigo Vazquez, le
ugar á la Inuerte de Escobedo, y que enseñó un mandamiento del rey con
Antonio Perez dió al rey por cartas, cebido en estos términos:
dictó este auto singular y notable:
«Presidente, podeis decir á Anto
«Habiendo hecho al rey N. S. rela nio Perez de mi parte, y si fuese ne
cion de que parecia ser Antonio Perez cesario enseñarle este papel, que él
el autor de la muerte del secretario sabe muy bien la noticia que yo tengo
Escobedo con voluntad y consenti de haber hecho matar á Escobedo, y
miento de S. M., y que era convenien las causas que me dijo para ello habia.
te obrase este consentimiento en el Y porque á mi satisfaccion y á mi
proceso para descargo de Antonio Pe conciencia conviene saber si estas fue
rez, y poder conforme á esto absolver ron ó no bastantes, ya yo le mando que
le como era justo, y que asimismo se os las diga, y dé particular razon de
ria necesario se mostrasen las causas ella, que os muestre ya la verdad lo
para que no se ofenda en un punto la que á mí me dijo que vos sabeis, por
reputacion de S.M., convino el rey en que yo os lo he dicho particularmente:
que asi se hiciese; en consecuencia, para que habiendo yo entendido lo que
manda S.S. que Antonio Perez mues— asi os dijere, y razon que os diere
tre las dichas causas, y la averiguacion de ello, mande hacer lo que en todo
de probanzas que haya de ellas.» convenga. En Madrid, á 4 de enero
de 1590.—Yo el Rey.»
Estraña y singular providencia;
esceso de notable injusticia, intriga Al ver Antonio Perez la alegría que
infame urdida bajo el velo de la justi— brillaba en el rostro de su enemigo,
cia! A los doce años, cuando se creian respondió sereno y tranquilo, refirién
ocupados todos sus papeles, cuando ha dose ó cuanto tenia dicho, sin que su
bian fallecido muchas de las personas piese de la muerte mas que lo que to
que habian intervenido en el suceso, dos sabian, sin haber tenido parte al
cuando no quedaba al que se acusaba guna en ella.
como reo, medio alguno para su de— Decididamente se caminaba en la
fensa, se le compelia á una declara persecucion de Antonio Perez. Tapá
cion, á la presentacion de documentos ronse las ventanas por donde recibia
que creia el rey que no podian presen luz en su prision; claváronse algunas
tarse, empero que mas tarde veremos puertas, y todo anunciaba que des
como la prevision de Antonio Perez pues de un largo período de doce años
ANTONIO PEREZ. 133

iba la causa aproximándose al punto el vestido de aquel hombre elegante,


de la catástrofe. objeto del respeto de los cortesanos,
Admirado el rey de la resolu cuya amistad ansiaban los príncipes
cion y firmeza de su ministro, hu estrangeros y que era las delicias de
bo un momento en que intentó sal las damas de la córte. Desnudo aquel
varle. Asi es que cuando Antonio Pe hombre ante quien, aun en la prision,
rez recusó á su juez Rodrigo Vazquez, se postraban los magnates del rey, le
el rey dió por ¿? con—juez á cruzó el verdugo los brazos, le ató una
Juan Gomez, miembro del Consejo y cuerda de cáñamo y comenzó á darle
de la cámara. Ambos jueces requirie una vuelta de cordel. Los alaridos del
ron varias veces á Antonio Perez á desgraciado Perez atronaban la redu
que declarase los motivos de la muer cida estancia de su prision y protesta
te de Escobedo; pero jamás pudie ba que primero moriria que declarar
ron arrancarle una palabra mas de lo nada.
que habia dicho. Entonces, el 21 de Una segunda, una tercera , una
febrero, mandaron, para vencer su cuarta y una quinta vuelta aumenta—
tenacidad, echarle una cadena al cuer ron sus intensos dolores. Parecia que
po y ponerle dos pares de grillos. Al el reo iba á espirar. Los jueces impasi
mismo tiempo, para que no pudiese bles le requerian á que dijese la ver
gestionar en favor suyo, la desgracia dad. Todavía permanecia firme. La na
da doña Juana Coello fué arrestada en turaleza, sin embargo, sucumbia, y á
su misma casa con tanta estrechez que la sétima y octava vuelta se rindió
solo se la permitió poder salir á misa, manifestando que no podia resistir á
sin embargo de que contra ella no re tan agudos dolores y ofreció declarar
sultaba culpa ninguna. y declaró las causas políticas que ha
Se trataba á todo trance de que Pe bian preparado la muerte de Escobe
rez se declarase reo del asesinato de do. Estas causas las conocen nuestros
Escobedo; sus enemigos querian lle lectores porque las hemos espresado
var su cabeza al cadalso crevéndole al principio de nuestra relacion. Ma—
falto de pruebas. Asi es que l dia 23 nifestó tambien que no habia declara
de febrero se presentaron los jueces do antes por guardar fidelidad al rey,
en la prision y le espresaron la volun en cumplimiento de órdenes que tenia
tad del rey de que declarase la ver escritas de su puño y letra para que
dad. Contestó lo que repetidas veces no rebelase jamás aquel secreto.
habia manifestado. Entonces le ame Tenian, pues, los enemigos de Pe
nazaron con el tormento y recibió esta rez cuanto deseaban. Obraban bajo la
noticia cruel con la mayor serenidad. creencia de que no quedaba en su
En vano espresó su cualidad de hijo poder documento alguno para probar
dalgo y de noble; en vano, cual aquel la disculpa presentada de haber pro
ciudadano de Roma, á quien Verres cedido en virtud de las órdenes del rey.
condenó á la pena infamante de los La fuerza con que-le habian ator—
azotes, clamaba: civis romanus sunt; mentado produjo á Antonio Perez una
de nada sirvió á Antonio Perez, que grave enfermedad en la que estuvo á
era noble, y noble aragonés, ningun punto de perder la vida. Se dirigió al
caso se hizo de su manifestacion. Per rey pidiendo se le concediese la asis
manecieron inexorables aquellos dos tencia de su familia. El médico de la
hombres que le interrogaban, que mas córte, Torres, certificó que se hallaba
que jueces eran sus verdugos. Llamóse con una fuerte calentura, y entonces
al que verdaderamente lo era por su se le concedió la asistencia de un cria
oficio º por su carácter, Diego Ruiz, do, que entró por primera vez en su
el cual se presentó á la vista de Anto prision el 2 de marzo de 1590, con
nio Perez con todos los repugnantes y prohibicion absoluta de volver á salir
horribles instrumentos de su odiosa ni de hablar con nadie. No servian á
¿ Puso el verdugo la mano so un hombre atormentado, á un hombre
re el hombro del primer ministro del que se hallaba con enfermedad, los
rey mas poderoso del mundo; desató cuidados de un criado; eran necesa
una por una las piezas que constituian rios los cuidados de su afligida esposa.
154 CAUSAS CELEBRES.
=== =3

Esta lo solicitaba vivamente, y el rey habia aplicado cuando se hallaba en


conmovido la dió licencia para ir con el poder; solo habia un punto en Es
sus hijos á cuidar al prisionero, lo que paña, donde la justicia pudiese ha
verificó en los primeros dias de abril. cer valer sus fueros, y ese punto era
No quedaba ya duda á Antonio Pe Aragon; habia llegado el momento de
rez del fin que se proponian sus ene que él pudiese ampararse de sus leyes:
migos, por lo cual, en cuanto recobró en Aragon, y con la prevision del pe
algunas fuerzas, se dedicó á preparar ligro en que pudiese verse un dia, ha
su fuga para el momento en que se lo bia, como hemos visto, alhagado, y ser
permitiese el estado de su salud. vido á los naturales de aquel pais, y
Estendida por la có te y por las contraido estrecha amistad con los
provincias la noticia de su tormento, principales magnates y con don Juan
la opinion esperimentó un gran cam de Lanuza, justicia mayor de Ara
b o. Aquel hombre á quien poco antes 20Il.Apenas restablecido algun tanto de
so

miraban con odio los unos, con envi


dia los demas, fué el objeto del duelo las dolencias que le ocasionara el tor
y de la compasion general. Algunos mento, lo dispuso y concertó todo
cortesanos envidiosos gozaban al ver para la fuga con el mayor sigilo. Vino
los tormentos de aquel á quien por su paisano , y pariente Gil de Mesa,
tantos años se habian visto precisados y de acuerdo con su secretario parti
á adular y humillarse en su presencia, cular, un genovés Juan Francisco Ma
una sola voz se alzó en su favor para yorini, tuvieron caballos de posta pre
ímplorar la gracia de Felipe II. Solo un parados fuera de la puerta de Alcalá
digno sacerdote, un fraile observante para trasladarse rápidamente á tierra
de San Francisco, el padre Salinas, de Aragon.
predicando un dia en la capilla real del Faltaba encontrar el dia y la ocasion.
palacio, y hablando de lo efímero de Presentóse esta el 18 de abril, Miérco
las cosas de este mundo, de las vani les Santo. Habia dos dias antes su mu
dades, de los honores y del poder de ger, que le asistia, hecho creer que se
la tierra, terminaba su fervorosa ora hallaba mas agravado de sus dolencias.
cion con estas sentidas palabras: . A las nueve de la noche despues de
«Hombres, que os hallais desvane haber colocado un bulto enmascarado
cidos y boqui-abiertos ¿no veis el de en su cama, se puso Perez un vestido
sengaño, no veis el peligro en que vi de su muger, y con el trage y manto
vis? ¿No le veis? ¿No le vísteis ayer en de esta salió por en medio de sus guar
la cumbre y hoy en el tormento, sin das, que no hicieron reparo, y mas al
saber porque ha tantos años que le ver que con voz fingida les encargó que
afligen? ¿Qué buscais? ¿Qué esperais?» no hiciesen ruido por no despertar al
Perez, resuelto á verificar su fuga, enfermo.
y habiéndose convenido antes por me Ya en la calle marchó á casa de un
dio de algunos amigos suyos, resolvió amigo donde le esperaba Gil de Mesa,
irse á Aragon á ampararse alli de sus cambió el trage de muger en un mo
fueros y libertades. Veia que su causa desto vestido, y se dirigió con Gil á
se iba complicando con otros ramos tomar la puerta de Alcalá.
separados y peligrosos. Cuantos tenian A punto estuvo de frustrarse su bien
quejas contra él ó habian descubierto combinado plan, porque en las calles
algun delito, se presentaban á los jue encontraron á un alcalde de córte con
ces y estos los acogian con ansia para su ronda. Habló el alcalde con Gil de
aumentar las causas que jugaban en Mesa que le respondió con toda sereni
el proceso. dad permaneciendo un tanto aparta
Arreciaba por momentos la tor do Pérez, como si fuese un criado de
menta: no habia tiempo que perder, aquel.
de un momento á otro podia dictarse Salvado este encuentro logró llegar
la sentencia, y ejecutarse instantánea á donde estaban los caballos. Aunque
mente ya ui. ya secretamente: flaco y casi descoyuntado montó á ca
conocia Perez muy bien la jurispru ballo y corrió sin descanso hasta las
dencia de su época, y él mismo la fronteras de Aragon, que nada da mas
ANTONIO PEREZ. 455
-

aliento y ánimo, que el deseo de huir ni contaban con fondos, y cuidaron se


de la muerte. -

gun su interés de emplearlos todos.


Para dificultar que pudiese darse Alcanzó la órden del rey al fugiti
alcance al fugitivo ministro, descubier vo Antonio Perez en Calatayud, pe
ta que fuese su fuga, algunas horas ro ya éste, de acuerdo con sus amigos
y esperando de un instante á otro la
despues salió en posta Mayorini, el ac
tivo é infatigable genovés, para cansar
Ilegada de las requisitorias y de las
segunda vez los caballos de posta, y gentes del rey, se habia ¿¿ t0

evitar que pudiesen las gentes del rey mado asilo en el convento de los frai
alcanzarlo. les dominicos.
. Pasó toda la noche del Miércoles Presentóse para prenderle don Mi
Santo sin que se advirtiese la fuga guel Zapata, delegado del rey, el cual
de Perez, pero á la mañana siguiente, rodeó con gente armada el convento
Jueves Santo 19, se descubrió el en intentando estraerle; pero el pueblo se
gaño. alarmó, formaron grande oposicion las
Irritado el rey, burlados los jueces autoridades eclesiásticas; y habiendo
al ver que se les escapaba la presa que avisado á don Juan de Luna, señor de
creian tener segura, y contemplando Purroy, diputado del reino, acudió és
desvanecido el fruto de doce años de te con cuarenta arcabuceros de los
amaños y de intrigas, convirtieron todo que tenia en su territorio, é hizo reti
su ódio contra la muger y los hijos de rar á las gentes que venian á pren
Antonio Perez. derle, permaneciendo Perez arrestado
Entonces el juez don Rodrigo Vaz en una celda del monasterio.
quez dió auto de prision contra la mu El dia 24 de abril escribió Antonio
ger é hijos de Antonio Perez, y presen Perez al rey una carta llena de respe
ció Madrid el bárbaro espectáculo de to y sumisión manifestándole las cau
que atravesando por en medio de las sas que le habian movido á fugarse de
procesiones de Jueves Santo fuesen la prision , y disculpándose de este
conducidos públicamente y con desu hecho y solicitando le enviase su mu
sado aparato á la cárcel de Madrid, sin ger y sus hijos para poder vivir tran
consideracion ni á su sexo ni á su quilo el resto de sus dias en un rin
edad y cualidades!..... con del reino aragonés. Escribió tam
El pueblo que siempre se pone con bien al mismo tiempo al confesor de
noble instinto de parte de los oprimi S. M., el padre Chaves y al cardenal
dos, acompañó con su conmiseracion á arzobispo de Toledo.
aquellas desgraciadas víctimas, olvidó Ya desde el primer dia de su es
los crímenes del un tiempo favorito tancia en Calatavud habia enviado á
del monarca y solo vió su desgracia y su grande amigo Gil de Mesa á Zarago
la noble abnegacion de una esposa y za para que solicitase del Justicia el
de unos hijos que comprometian su privilegio de la manifestacion.
vida por salvar la de su esposo y Este privilegio de la manifestacion
padre. era uno de los puntos principales de
Al mismo tiempo partian con toda los fueros aragoneses: era una garan
diligencia requisitorias á Aragon para tía de que no podian ser atropellados
que se prendiera vivo ó muerto á An los naturales de aquel pais por los ofi
tonio Perez. ciales y justicias del reino. Segun la
La industria , de Mayorini habia legislacion aragonesa, en las materias
producido su efecto. Donde , quiera contenciosas de aquel reino, el que se
que llegaban los emisarios del rey sentia agraviado se manifestaba, es de
encontraban cansados los caballos. Ha cir, se presentaba por sí ó por medio
bian hecho estos sucesivamente en de apoderado al Justicia mayor ó á al
aquel dia dos carreras. Entonces ha guno de sus cinco lugartenientes, y
bia muy pocos caballos en cada para sin mas que esta manifestacion deja
da. El servicio de las postas estaba re ba de tener por juez al rey, el cual
ducido solo á los mensages del gobier únicamente podia presentarse en el
no, y para esto bastaba cuatro ó cinco juicio como parte acusadora, sometién
caballos en cada punto. Mesa y Mayori dose el fallo del negocio al Justicia ma
1.36 CAUSAS CELEBRES.
-

yor, y de su sentencia no habia apela con el objeto de trabajar en la modifi


C10n, cacion de uno de sus mas importantes
Habia una cárcel particular en la fueros: tratábase de hacer que fuesen
que se detenian y custodiaban los que admitidos en aquel reino los vireyes
se manifestaban y que tenia el nombre que el monarca quisiese poner, aun
de Manifestacion ó de los Fueros. cuando fuesen estrangeros, es decir,
El Justicia mayor, don Juan de La no naturales de Aragon.
nuza, que á su amor por la conserva Los diputados de Aragon, cuando
cion de los fueros unia una grande el monarca nombraba algun virey que
amistad con Antonio Perez, le concedió no fuese del pais, presentaban inme
luego la manifestacion, siendo Perez diatamente su inhibicion ante la córte
trasladado con custodia bastante para del Justicia, y únicamente cuando el
que las tropas del rey no le arrebata conde de Mélito ejerció su cargo, lo fué
sen en el camino, á Zaragoza. con la espresa condicion de que jamás
Grande fué el entusiasmo con que podria alegarse su admision como an
Antonio Perez fué recibido en Zarago tecedente, y se entendia que el monar
za. Tenia alli muchos amigos, que con ca renunciaba al derecho que preten
tiempo y prevision habia sabido ga dia tener de ponerlos sin consenti
narse. Enseñaba á los aragoneses las miento de las córtes de Aragon.
huellas que habia estampado en sus El rey Felipe Il no contestó á las
brazos el tormento; alababa la le cartas que desde Calatayud habia es—
gislacion protectora de aquel pais, de crito Antonio Perez; y asi volvió éste
la que decia aguardar toda su salva á repetir sus gestiones escribiendo al
cion, y no solamente las gentes del rey en 1.º de mayo, y al confesor en
pueblo sino las del clero y hasta los el dia 7. -

religiosos ensalzaban el amor que á Al ver Antonio Perez que el rey se


aquellas instituciones tenia Antonio proponia continuar el proceso ante el
Perez, é iban preparando y fomentan Justicia de Aragon, volvió á escribir al
do la opinion pública en su favor. confesor el dia 10 de mayo; y viendo
Entretanto en Madrid el rey habia que no tenian respuesta sus cartas, que
hecho que se acumulasen al incidente el proceso instaurado en el tribunal del
de la evasion otras dos causas gravísi Justicia continuaba, y que se aproxi
mas. Bartolomé de la Hera acusó á An maba el momento decisivo de defen
tonio Perez de haber muerto con ve— derse, escribió al rey en 10 de junio
neno á su hermano don Pedro, astró esta sentida carta:
logo, hombre á quien dispensaba gran
de amistad y confianza. Andrés Mar— SACRA, CAToLICA, REAL, MAGESTAD.
gado le acusó de que habia cometido
igual crímen en la persona de su her «He escrito á Vuestra Magestad por
mano Rodrigo, caballerizo suyo, confi dos cartas la causa de mi salida de Cas
dente y portador de las cartas y men tilla y venida á este reino, y al confesor
sages frecuentes que mediaban entre de V. Magestad, he advertido despues
la princesa de Eboli y Perez todo el algunas otras cosas mas en particular
tiempo que estuvo preso. por lo que debo á su Real servicio, y
Acumuladas todas estas piezas con aunque entiendo que él ayrá dado
la parte del proceso que se habia se quenta á V. Magestad de todo aquello
guido en el largo período de los once por su obligacion, como esta causa se
años y medio, se remitió todo á Zara va poniendo muy adelante y en neces
goza para que se acusase en forma á sidad de á descargos vivos,
Antonio Perez, pues ya hemos dicho por tratarse de la honra de mis padres
que en virtud de la manifestacion, el y hijos y mia, he querido hacer de
rey de juez pasaba á constituirse en nuevo advertimiento á V. Magestad de
parte acusadora. lo que me paresce que mucho convie
Se encargó el activar esta causa ne. Y por ser de la calidad que son es
al marqués de Almenara, don Iñigo de tas materias, he procurado no fiar de
Mendoza y la Cerda, que se hallaba papel solo la informacion de V. Mages
de comisario del rey en aquella ciudad tad sobre ellas, y tambien porque con
ANTONIO PEREZ. 157

relacion de voz viva sea V. Magestad fácilmente, devió de haber particular


mejor informado; y ansi he pedido al passion en el que aconsejó despues que
conde de Morata, por su calidad y es— se pussiessen en ju yzio aquellas cau
tima en este Reyno, con cuyos padres sas, pensando por ventura meter en
y con él tuvo el mio mucha amistad, dilaziones nuevas por aquel camino mi
que me encaminasse una persona de justicia y el fin de mis trabajos, y que
christiandad y prudencia de quien po con averme tomado mis papeles y pe
der fiar un despacho y comission tal. dido á mi muger los ¿ entr"Gº
El que me ha dado para esto es el pa V. Magestad y my, habia de faltar des
dre prior de Gotor. El lleva entendido cargo y ahogarse mi justicia, y quedar
muy en particular en la confianza de por embuste todo, como el tal ministro
sacerdote, y visto por vista de ojos dezia y escribia á V. Magestad. Y sup
muchas de las prendas que yo tengo plico á V. Magestad por aquel amor y
para my descargo que he hallado entre fidelidad con que siempre le he servi
otros papeles y cosas mias que acaso do, que haga mirar bien á personas
eriados mios en los arrebatos de la desapassionadas sobre esto, y si con
justicia, que han sucedido en mi casa viene que lleguen á juizio tales pape
los años pasados, pusieron en cobro: les de V. Magestad y tales cartas de su
y cuán llenas están de confianzas y se confessor, y tal variedad de juizio y
cretos tocantes no solo á esta materia, caminos como se han mudado en esta
pero á otras muchas de grande impor causa y persona, pero que no se diffie
¿ á personas muy graves, vas ra la resoluzion y remedio, porque lle
sallos de V. Magestad. A V. Magestad gará la hora del descargo á que en ley
suplico sea servido de oyrle, por lo natural y divina no se puede faltar,
que conviene á su Real servicio y á la tratándose de la honra de tantos inno
auctoridad de sus negocios, que han centes. Tambien supplico á V. Mages
passado por estas manos y confianza: tad por quien es y por lo que toca á su
y verá V. Magestad que las veces que Real auctoridad, que advierta con su
le he advertido tanto tiempo ha que se gran prudencia que no le engañen ma
tomasse en este negocio otro espedien los consejos en sombras de m y perso
te y traza del que se ha tomado última na, que no son menester, señor, me
mente, no era por faltarle verdad á dios tan costosos ni de tanta desaucto
m y justicia, pues euando mas no hu— ridad y escándalo para effecto tan se
viera, tenia á V. Magestad por testigo guro y cierto, pues la , voluntad de
y juez della, sino por escusar (como V. Magestad y sus mandamientos se
quien sabia los sacramentos y miste— rán las verdaderas cadenas y prisio
rios grandes del discurso de esta cau nes, como he dicho diversas vezes, pa
sa) los grandes inconvenientes y es ra que yo viva en el rincon deste Rey
cándalos que de la publicidad della se no que V. Magestad mandare y seña
podian seguir. Y aunque puede ser que lare mientras no valiere algo para su
con buena intencion, por algun res servicio. Y , que V. Magestad se sirva
pecto particular, hayan algunos acon— que se me den my muger y hijos para
sejado á V. Magestad que venia decla que vivan conmigo y que repossemos
rar como passó la muerte de Escobedo, todos ay un rato de tantas miserias y
como me escribió el confessor de V. Ma tormentas; pues en ello hará V. Mages
gestad, por dos cartas que se hiciesse, tad una piedad muy digna de su ¿
no sé sy con la misma buena intencion christiandad, y grata á los ojos de Dios
lo haya hecho el que ha aconsejado que y de las gentes. El guarde la real per
se llegue á juyzio y averiguacion de las sona de V. Magestad y dé tan larga vi
causas que movieron á V. Magestad da como la christiandad ha menester.
para el tal effecto: á lo menos en lo De Zaragoza, á 10 de junio de 1590
primero sé yo º paresció al confesor años.—Antonio Perez.»
de V. Magestad, entonces acertado el
medio que yo le propuse de amistades Tambien escribió al confesor di
para salir de lo de la muerte; y assy ciéndole el apuro en que se hallaba, y
creo tambien que pues aquella resolu que habia llegado la hora de su des
cion con ser tan grande se mudó tan cargo, en los términos siguientes;
58 CAUSAS CELEBIRES.
==e

«Viendo que se va llegando la hora con la misma ortografía, la instruccion


de my descargo en este juyzio en que dada al padre prior de Gotor, porque
estoy puesto, y que no tengo respues ella da una idea completa y acaba
ta á cosa de las que he escrito á V. Pa da del objeto de su importantísima
ternidad, me he resuelto de hazer este mision.....
último officio, con Su Magestad y con
V. Paternidad, porque no quede prue INSTRUCCION DADA AL PADRE G0TOR.
ba por hazer de mi fidelidad, y porque
de lo que escrivo á Su Magestad, de Llegado que sea V. Paternidad á
que va copia con esta, y por lo que Madrid, podrá comunicar muy segu
V. Paternidad oyrá del padre Prior ramente toda la comision con el padre
de Gotor, entenderá muchas verda prior de Nuestra Señora de Atocha en
des que no le repetiré yo en esta, ni confianza de sacerdote, porque demás
cansaré á V. Paternidad con suppli de ser persona tan grave en religion
carle mire bien en todo ello, pues ello y christiandad, tiene alguna notizia de
mismo le dirá lo mucho que conviene mis trabajos y mucho amor y compa
al servicio de Dios, al de Su Magestad, sion hácia ellos. Despues desto y con
á la auctoridad particular de V. Pater su comunicacion y medio, ó el que le
nidad. Cuya Reverendísima persona diese á V. Paternidad, hablará al se
guarde Dios muchos años. De Zara ñor Confesor de Su Magestad ó le dará
goza á 10 de junio de 1590.—Antonio my carta que para él lleva, en que le
Perez.» embió copia de la que escrivo á Su
Magestad. Por las cuales y por lo que
No podia en tan apurado lance ol V. Paternidad le dirá en conformidad
vidar Antonio Perez á su sincero ami dellas y lo demas que lleva entendi
go y protector don Gaspar de Quiroga, do, entenderá Su Paternidad Reveren
cardenal, arzobispo de Toledo, a quien dísima la causa que me ha movido á
tambien escribió con la misma fecha de dar á, V. Paternidad el trabajo desta
10 de junio, en los mismos términos jornada y commission. Que es todo fi
dándole cuenta de la mision que ha— delidad al servicio de Su Magestad y
bia comunicado al padre Gotor, y ro respecto á la auctoridad de sus ne
gándole que hiciese conocer al rey que gocios y de Su Paternidad Reverendí
aquel era el último medio de concilia sima.
cion que intentaba, porque era llega Hecho esto, aunque es de creer que
do el momento de defender su honra, el señor Confesor no impedirá que se
y estaba resuelto á usar de la defensa haga officio con Su Magestad tan im
tan propia y de derecho natural por portante á su servicio, y en tanta jus
mantenerla ilesa y sin mancha, como el tificacion y descargo mio y remedio de
mas preciado, y único patrimonio que tantos inconvenientes, todavía en caso
podia dejar á sus hijos. contrario vaya V. Paternidad adverti
Desconfiaba Antonio Perez de que do que en cualquier manera ha de pro
se contestase á su correspondencia, y curár hazer el tal officio con Su Mages
asi para hacer ver al rey que estaba tad, ny contentarse tampoco con que
en la falsa persuasion de que le habia le offrezcan que embiarán á Su Mages
ocupado todos los papeles y que no le tad razon de todo, y que con esto po
quedaba medio alguno de de de drá escusar el darle pesadumbre, por
º.
terminó enviar á la córte al padre Go— que es el efecto y acertamiento de estas
tor, á quien habia enseñado confiden comisiones, que Su Magestad oiga de
cialmente los billetes originales del V. Paternidad mismo las verdades que
rey en que constaba haberle mandado le he dicho y mostrado. Y assy encar
dar muerte á Escobedo, y al mismo go y supplico á V. Paternidad que por
tiempo redactó para él una instruccion ningun caso dexe de hacer en persona
para que siguiéndola le hiciese ver lo este offizio con Su Magestad. El qual
conveniente que seria el que desistie en sustancia es lo que contiene la
se de su demanda y le devolviese su carta que le escrivo, que consiste en
libertad. No podemos renunciar á la dos puntos. El uno que vea mi fide
idea de copiar literalmente y hasta lidad en no querer llegará mi descar
ANTONIO PEREZ.
# 3->

go sin darle quenta de las prendas que potro tan lastimosamente, y de mano
tengo con que descargarme. El otro de un juez enemigo mio, y apassiona
supplicarle que no permita que con do y recusado, y el temor que tras es
medios de tanto escándalo y desauc— to pude concebir de que ministros que
toridad de la justizia se procure lo que assy me maltratavan y havian tornado
está tan cierto y seguro con cualquier á encantar mi causa, devian de llevar
seña, quanto mas mandamiento suyo, fin de ahogar mi justicia, y acabar la
que es el sosiego y residencia desta vida y honra de padres y hijos desta
persona en la parte y rincon que Su persona con mucha offensa de la gran
Magestad fuere servido señalarme des chistiandad y justicia de Su Magestad.
te reyno.
A este propósito vaya Vuestra Pa SOBRE EL PRIMER PUNTO.
ternidad advertido de hazer fée de lo
ue sabe de mi llegada á Calatayud y Sobre lo primero, demas de haver
e lo que ally vió y passó, en prueva perdon de parte, de que consta, ha
de la seguridad de mi ánimo y inten visto V. Paternidad por sus ojos que
cion, y de haber podido, si quissiera, se hizieron las amistades con comuni
dexar de ser preso y salir deste Reyno cacion del señor Confessor de Su Ma
segun tuve el tiempo y comodidades, y gestad.
que pues esto passa assy, y es tan no Ha visto por cartas de mano de Su
torio en todo este Reyno, y el mismo Paternidad Reverendíssima como me
Reyno ha escrito á su Magestad, sea aconseja que declare la muerte y por
servido dar crédito antes á tales prue cuya órden se hizo, sin tratar ni de
bas reales que á las sombras que la clarar nada de causas. Las quales di
Invidia pone contra my. Para que chas dos cartas, cuando no huviesse
V. Paternidad tenga memoria de la in otros recaudos, son bastante descargo
formazion que le he hecho y de los pa de todo lo que puede tocar á muerte y
peles que le he mostrado, le he dado causas della, que lleva V. Paternidad
un advertimiento sobre que se fundº copia para mejor informazion suya.
todo este negocio, con memoria de los Ha visto demas desto diversos vi
papeles que le he mostrado tocantes á lletes mios para Su Magestad, respon
cada cosa, y demas de aquellos, reco didos de su Real mano, sobresta muer
jere aquy la materia en algunos cabos. te, y sobre muchas particularidades
Ya V. Paternidad tiene entendidos los corrientes sobre el tal caso.
cargos que se me ha hecho, que son: Ha visto assymismo diversos ville
4. º Muerte de Escovedo alevosa— tes del sentimiento de Su Magestad de
mente, con nombre de que su Mages las licencias y atrevimientos del dicho
tad lo mandáva, non siendo ansy. Juan de Escovedo precedentes á la
2.º Haber descubierto los secretos muerte.
del officio de Secretario de Estado á Ha visto como despues que Esco
diversas personas, y que en los des vedo entró en el servicio del señor don
pachos que venian en cifra á Su Ma Juan, se tuvo noticia de las intelligen
gestad añadia y quitaba lo que me pa cias, que se comenzaron á tener estan
rescia á m y á propósito, y que assy do en Italia, y se prosiguieron despues
lo avisaba al secretario Escovedo, co desde Flandes, sobre la empresa de
mo constará por cartas para él mias.Inglaterra. Todo esto por villetes mios
3." La fuga accumulando en esto para Su Magestad, respondidos de su
que la intenté otras diversas veces.Real mano, y por minutas de my mano
Sobresto dire primero que hay poco de cartas para el señor don Juan y pa
que dezir, pues verdaderamente se ra Escovedo en que se trata destas
vee que yo me vine: he escrito á Su mismas intelligencias, y en que repre
Magestad la causa dello, que fué ver hendo á Escovedo como no havia avi
me á cabo de onze años, y despues de sado acá dello glosadas de mano de Su
tantas prisiones y destrozos, y mise Magestad.
rias, y despues de haver sido puesto Ha visto V. Paternidad diversos
en tanta manera de juizios sin ver el villetes de como daba quenta á Su Ma
fin de ninguno dellos, ponerme en un gestad de lo que passaba con el Nun
60 CAUSAS CELEBRES.

cio sobre esto, y de lo que me escri tad, y el cuidado que le daba de como
vian, y de lo que yo les respondia so se habian de volver á cerrar. Estre
bre el caso, y sobre el nuevo desseo churas tan grandes y confianzas tan
que concibieron bien apretado, de de hondas, que no hay caso por grave y
xar lo de Flandes por cessar esta em grande que fuesse, que no pudiesse
presa, de venirse á España, ó ir á Fran caber y hundirse en ellas.
cia con gente de guerra á salir de ally Ha visto diversos villetes de con
por aquellas ó por otras trazas. Y , en fianzas y favores grandes de Su Ma
particular al propósito desto, ha visto gestad á esta persona perseguida, en
cartas en cifras y descifradas y firma particular uno despues de la muerte
das del señor don Juan y de Escovedo de Escovedo, comenzada ya en vida del
bien estrechas y apretadas: Marqués de los Velez y corriente la per
Ha visto V. Paternidad la venida secucion contra my por la tal muerte
de Escovedo á España de rebato sobre con el cual (avisando yo á Su Magestad
havérsele escrito que en ninguna ma que el Marqués era muerto con harta
nera lo hiziesse, y del desgusto que de lástima mia de tal pérdida y temiendo
llo recibió Su Magestad, declarado de la falta que havia de hacer su persona
su Real mano, sobre una carta de ma por andar yo á la parte de la invidia
no de Escovedo para my. contra el de sus enemigos, como tan
amigo suyo, sin la que yo por my y por
SOBRE EL SEGUNDO PUNTO. la gracia de Su Magestad ya padescia y
por ser servidor y Consejero el mismo
Marqués de toda esta historia, y verda
la visto V. Paternidad muchas des de ellas y consultor y medianero de
cartas descifradas y glosadas de ma las mercedes que Su Magestad me tenia
no de Su Magestad, que se quite, ponga hechas). Su Magestad me responde en el
mude. -

tal villete que no me faltará y , que no


Ha visto cartas del señor don Juan me hallaré solo por la muerte del Mar
de Escovedo en cifra y firmadas de qués de los Velez, y otras tales cosas,
los, y los descifrados de mano de ller y en particular que á my no me hará
nando de Escovar (que era la mano de falta el Marqués, y que esté seguro
todas estas cosas concernientes á esta desto, y que tenga buen ánimo que
fuerte historia) en que me escriven bien lo puede tener. (Diciendo de su
que las tiemple y modere y sazone, Real mano, apropósito de la muerte
(palabras dellos son) sy me paresciere del dicho Marqués estas palabras):
convenir. «Estoy de manera que no sé lo que
Ha visto villetes mios pa Su Ma me digo, y cuanto mas pienso en ello,
gestad, y respondidos de su real mano mas lo siento, y cierto por vos y por
por donde paresce que le devia de my que pierdo mucho, y esperó que
mostrar los despachos como tenia; y vos no tanto, porque yo no os faltaré
ha visto minutas de cartas mias en y desto estad seguro y tened buen
que á ellos les escrivia que quitava y ánimo que bien podeys.» (Y revuelve
ponia, y estas glosadas de mano de Su Su Magestad sobre el sentimiento y
Magestad. dice: «No sé que me diga agora sobre
Ha visto el villete que yo llamo de nada, sino en lo que de vos he dicho,
la Theología, de que (si no me engaño) que en esto no me desdigo, y se lo que
hize mencion la noche de aquel glo me digo en ello.» Prendas, señor, que
ioso tormento, pues fué por fideli les haria yo ofensa en calificarlas,
dad de my Rey, en que le doy cuenta pues si se pudiessen hallar hombres
de como he escrito al señor don Juan de ley no natural, no dudarian de po—
y á Escovedo y de como me responde ner y dar sobre ellas la sangre y el
Su Magestad que haga lo que devo y caudal todo, como yo no he dudado de
que aquella es su Theología y lo que de llas en lo mas profundo de mis mise
vo hacer. rias y persecuziones, ny perdido la
Ha visto algunos villetes de como confianza, que hoy en dia me la tengo
se abrian despachos de personas par aquy viva y depositada en my seno y
ticulares con sabiduría de Su Mages ánimo. Testigo de mi verdad y fidelidad
ANTONIO PEREZ, 164
g =Nue-º

que, con el testimonio de Su Magestad como consta haverlos recibido el señor


lo tengo por dos mill testigos. Confesor por cartas y por tes
Ha visto V. Paternidad copia de un timonio de los que se los entregaron,
villete de Matheo Vazquez á Su Mages hayan quedado acaso papeles de tanta
tad, cargándole la mano y la pluma razon y luz para my descargo. Con ser
bien pesadamente sobre la muerte de tales, y que por ello no solo me podré
Escovedo, hasta llegar á valerse de descargar, pero que parescerá la lim
juizios mathemáticos, provanza bas pieza de mi servicio, y fidelidades y
tante por cierto para tales cosas y mas méritos della, antepongo, como siem
de un sacerdote y ministros y de la pre, el respecto del servicio de Su
Inquisicion. Magestad y la auctoridad de sus nego
Ha visto sobre esto un papel de tal cios y el juizio del mundo, que pues
importancia para prueba de lo que la causa se ha hecho ya tan notoria
digo, y de la muerte y de las causas á todo él por la gran duracion de mis
que devia de tener para ello bien for trabajos y prisiones y por haber sido
zosas el que la hizo hazer, que deste conoscido de tantas naciones cerca de
papel le he querido dar copia de m Su Magestad por su gran clemencia, por
mano cotejado por entrambos con e causa de las principales se ha de tener
original. la consideracion de la satisfaccion del
Todo esto, señor, va dicho y ad mundo en m y causa, y que no viessen
vertido porque Su Magestad entienda las gentes quan poco en falso sino fir
las prendas que yo tengo para my des me y seguro respondí en aquel papel
cargo, y quán llenas estan estas de que anda por el mundo de mis descar—
muchas confianzas y secretos tocan gos, lleno todo de preñezes y señales
tes á esta materia y á otras muchas, destos mismos sacramentos y miste
y si conviene que salgan en juizio rios que no declaré por ha verse me or
en nota de muchas personas graves, denado entonces por el señor Confessor
en desconfianza de sus mismos vas que no me descargase con villetes de
sallos, en escándalo de todas las na mano de Su Magestad, por cuya obe
ciones, en offensa de la g" pruden dienzia y por la fidelidad devida á Su
cia y christiandad de Su Magestad, Magestad, obedescí y me dexé tras—
porque no se piense en el mundo que quilar, como cordero, y he callado
la culpa de aver sido tan mal gober onze años ha, hasta derramar la san
nado y guyado un negocio de tanta gre y dexar tender my persona y car—
importancia y de tantas consecuencias nes en un potro, glorioso todo para
haya sido de Su Magestad, siendo toda my, por haber sido en prueva de my
ella de ministros ó poco esperimenta fidelidad y secreto. Y pues al sabio y
dos en cosas tan grandes, ó apasiona prudente basta poco, siendo esto y lo
dos, que pensando que con averme to que V. Paternidad ha visto tanto, no
mado todos mis papeles y casi se pue ay para que advertirle de mas sino que
de dezir, saqueado mi casa de algua mire que dentro de ocho ó diez dias
ciles, havian de faltar descargos y me he de comenzar á descargarme, y que
ter en confusion mi justicia, como sy tendré por respuesta la hora y la ne
en semejantes y tan grandes negocios cessidad de my descargo, y advierta
y de tan gran secreto y confianza, y en esto V. Paternidad muchó.
precediente lo que he dicho, y á cabo Lleva V. Paternidad carta mia pa
de tanto tiempo, se pudiesse pedir á ra el Ilustrísimo cardenal de Toledo,
nadie las pruevas que en las causas á quien V. Paternidad ha de dar quen
ordinarias. Pero como para Dios todo ta de toda esta commission. Demás de
está presente, y en aquel abismo de lo que está dicho, se haze aquy á
Misericordia y Justicia proveydo, cuan V. Paternidad memoria de las copias y
do él es servido, muy con tiempo de papeles que lleva para su informazion
remedio contra la Malicia y Veneno, y para el officio que ha de hacer.
ha permitido que con haverse me to Lleva un apuntamiento sobre que
mado todos mis papeles, como he di se funda la informacion de todo este
cho y, es notorio, y los particulares y negocio. Lleva la copia de las cartas
confidentes entre Su Magestad y my, que he escrito al señor Conffessor á 7
462 CAUSAS CELEBRES,

y á 10 de Mayo, de que ay aviso que sas de Antonio Perez, secretario que


se le dieron. . fué de S. M., dijeron: que por cuanto
Copia de la carta de Antonio Perez la culpa de todo ello resulta contra el
para Su Magestad de primero de Mayo. dicho Antonio Perez, secretario que
Lleva copia de las cartas del señor fué de S. M., le debian condenar en la
Confessor sobre la muerte y silencio pena de muerte natural de horca, y
de las causas della, y sobre las amista que primero sea arrastrado por las ca
des. Cartas mucho de ver para my lles públicas en la forma acostumbra
descargo y de mucha consideracion da; que despues de muerto sea corta
por lo que toca al señor Confessor. da la cabeza con un cuchillo de hierro
Lleva una carta original de mano y acero, y sea puesta en lugar público
del presidente de Castilla, obispo de y alto, el que paresciere á dichos jue
Córdoba, don Antonio de Pazos, sobre ces, y de alli nadie sea osado á quitar
el negocio de la muerte, para que por le, pena de muerte, condenándole en
ella y por la letra que en ella va de la pérdida de todos sus bienes, que se
mano de su Magestad, vea que de aplicarán para la cámara y fisco de
aquella mano y letra son todos los pa S. M., y para las costas personales y
peles que ha visto y otros muchos mas procesales que con él y por su causa
que ay de la misma. se han hecho. Y asi lo proveyeron,
Lleva tambien copia del villete que mandaron y firmaron de sus nombres.
arriba se dize mio para su Magestad y —El licenciado Rodrigo Vazquez de
de la respuesta de su mano sobre lo Arce.—El licenciado Juan Gomez.—.
que avia de responder y respondió al Ante mí, Antonio Marquez.»
secretario Matheo Vazquez sobre la
muerte de Escovedo, por el qual se ve Mientras en Madrid el rey llevaba
rán tres ó cuatro cosas. las cosas á este estremo, mientras ha
1. Como se communicava con el bia formado una junta especial para
marqués de los Velez toda esta ma que detenidamente le consultase cuan
teria. - to se ocurriese sobre los asuntos de
2. Los officios que se y van hazien Antonio Perez, dándole parte en con
do contra Antonio Perez, sobre que ay sulta de los trámites que seguia el
demas desto muchos papeles y villetes. proceso en
3. Razon de la muerte.
º
y de los incidentes
que revelaban las comunicaciones del
4. Y lo que mas es, muestra en su marqués de Almenara, consultas que
Magestad de la satisfaccion de las cau el mismo rey leia y despachaba ano
sas que huvo para ella. tando de su puño y letra al márgen de
Zaragoza, á 10 de junio de 1590 cada párrafo la resolucion, llegaba el
años.—Antonio Perez. prior de Gotor á Madrid á desempeñar
la comision que le habia confiado An
Por una coincidencia singular, en tonio Perez.
el mismo dia en que Antonio Perez es Presentóse el buen religioso al con
cribia al rey, al confesor padre Cha fesor padre Chaves, y fué recibido du
ves, y al arzobispo de Toledo, y envia ra y bruscamente por éste, negándole
ba al padre Gotor para que hablase al desde luego que Antonio Perez pudie
rey: en Madrid se fallaba el proceso se tener ningun papel en probase
que se le habia formado, el que hemos que el rey le habia ordenado la muer
visto atravesar por tantas y tan varia te de Escobedo, y desmintiendo lo que
das peripecias en el largo periodo de los ojos mismos de aquel ilustrado sa
once años y medio, y se dictaba en él cerdote habian visto antes de tomar
la sentencia siguiente: sobre sí la delicada comision de hablar
al rey de asunto tan árduo.
«En la villa de Madrid, córte de Mejor acogida encontró en Felipe II,
S. M., á 10 de junio de 1590: visto por que le recibió con el mayor aprecio, le
los señores Rodrigo Varquez de Arce, oyó detenida y bondadosamente, y sin
presidente del Consejo de Hacienda, y comprometerse á nada le despidió de
el licenciado Juan Gomez, del Consejo jándole entrever algunas esperanzas
y Cámara de S.M., el proceso y cau en favor de su protegido.
ANTONIO PEREZ. 163

Nada, sin embargo, hizo el rey. La Aqui tenemos una muestra de las
sentencia dictada en Madrid se mandó que iremos presentando, algunas mas
á Aragon. Los agentes del rey en aquel culminantes todavía, de la interven
bais continuaban el proceso ante el cion directa que tomaba Felipe II en la
justicia, no dando paso alguno que no perdicion de su antiguo valido y mi
fuese mandado desde Madrid y orde nistro. -

nado por el rey á consulta de la junta Habia llegado la hora de que cesa
formada para entender en la causa de sen todas las contemplaciones de éste,
Antonio Perez. y resolvió justificarse ante los jueces
Habia llegado el momento, por ha de Aragon, apoyando la defensa y des
ber cumplido el término de presentar cargos en los billetes originales que
la defensa y descargos Antonio Perez conservaba del rey y en las cartas de
ante el tribunal de Justicia. Nada con su confesor; y esto es lo que forma el
testaba el rey á sus cartas; al contrario, célebre Memorial de Antonio Perez.
no pudiendo influir en la prision por En el descargo y probanza que pre
hallarse en la cárcel de los manifesta sentó para su defensa, probó Perez que
dos, el marqués de Almenara situó (º "d ¿ - -

una guardia esterior de vigilancia dia Hizo una breve relacion de sus ser
y noche para impedir que pudiera vicios al Estado y de la injusticia con
marcharse. Receloso tambien de que, que se le habia perseguido.
despues de presentada la defensa pi Refirió brevemente la acusacion
diese una fianza y se le otorgase la li que contra él dió Escobedo.
bertad, se dirigió al rey manifestán Mostraba que habia durado once
dole este peligro, y la Junta le con años su prision y pasaban años entre
sultó que temiendo que en Aragon la declaracion de un testigo á la de
diesen fianza á Perez con la probanza otro, paralizándose mientras sus nego
que hubiere hecho, y despues de pu Cl0S. -

blicada era menester procurar por to Hacia presente que habia sufrido
dos los medios que permaneciese pre el daño en su hacienda de ciento cin
so, siendo necesario acumularle las cuenta mil ducados, y padecido graves
muertes de Mangrado y de Pedro de la trabajos en su persona y en su casa.
llera, y que era urgente se remitiesen Manifestaba que al hacerle cargo en
estas diligencias. El rey, de su mismo el juicio de visita de que habia reve
puño y letra, contestó lo siguiente: lado los secretos del Estado se le ha
bia mandado que no se descargase de
«Yo escribo largo á Rodrigo Vaz— ellos. - -

quez sobre cosas en respuesta de lo Presentaba á la vista de sus jueces


que él me ha escrito sobre ellas: y asi que dos yeces habian entrado los mi
vos, Micer Campi (era el presidente de nistros de justicia en su casa y habian
la Junta formada sobre los negocios de arrebatado todos los papeles que tenia
Antonio Perez), os juntareis con él pa— sin formalidad alguna de inventario:
ra que os diga lo que me ha parecido Que su muger doña Juana Coello habia
para que comunicándolo luego con vos sido presa y apremiada duramente
trateis de ver la forma en que se ha para que entregase los papeles, los
de hacer lo que se refiere á los des— cuales tuvo que entregar para poder
pachos del modo que mas convenga. lograr su libertad: Que estos papeles
Con que no tengo mas que decir aqui fueron entregadas al confesor del rey
sino remitirme á lo que dirá Rodrigo ue ofreció tenerlos guardados para el
Vazquez conforme á lo que le he dicho; ¿ de sus descargos.
si esto que dice el gobernador sobre Estos papeles, contra su espresa
o de acumularle estas dos muertes, se voluntad, fueron vistos por Rodrigo
pudiese hacer á instancias de las par Vazquez su enemigo capital y juez, á
tes y no mia, creo que estaria bien, quien habia recusado, y que estos pa
pues á la mia no conviene por lo que peles no se le habian ¿
dirá Rodrigo Vazquez. Y asi se mire En aquellos papeles estaba su des
tambien en esto con los demas con el cargo de todo, y pues que se los ha
cuidado que hasta aqui.» bian quitado sin inventario, pedia al
164 CAUSAS CELEBRES.

tribunal diese por probados todos los l Dice que igual licencia y autoriza
artículos de su demanda. cion tenia del rey para variar las car
Manifestaba que despues de haber tas de don Juan de Austria, y como
se arreglado con el hijo de Escobedo prueba presenta cuatro cartas, donde
para la cesacion de sus proyectos, si al márgen habia el rey escrito de su
guiendo el parecer del confesor del puño y letra lo que habia que quitar ó
rey, de quien presentaba la carta, le añadir, ó mostrar, ó dejar de mostrar
iia dado tormento en Madrid Rodri al Consejo de Estado y otros particu
go Vazquez, juez á quien él habia re lares.
cusado. Ofrece presentar copia de una carta
Espresaba que por temor á los tor y respuesta original, en la que persua
mentos y á sus acerbos dolores, y pa dia á Escobedo de que no se hiciese
ra que no le obligasen á descubrir los cosa alguna sin órden de S. M.
secretos de Estado, se habia fugado sin Manifestó que aun cuando decia á
fracturar ni romper la cárcel, sino sa don Juan de Austria y á Escobedo que
liéndose disfrazado por las puertas de quitaba y añadia de sus cartas, nunca
ella, y habia venido á refugiarse al rei añadió ni quitó nada, porque todo se
no de Aragon y á ampararse de sus lo enseñaba á S. M. En prueba de esto
leyes. presentó un billete que escribió al rey
Su fuga habia sido con el objeto de con una carta de Escobedo. Este bille
ponerse en manos de los ministros del te era de un negocio grave y sospecho
TeV. so; y la respuesta del rey está en la
ºbesde el camino de Zaragoza, y de misma conformidad, admirándose de
Zaragoza mismo, habia acudido una y las ¿ diciéndole que no hi
dos veces al rey pidiéndole que se ciera lo que debia, sino le avisara de
acordase de sus descargos, y que no aquella manera de todo.
permitiese que se manifestasen las Presentó tambien otro billete que
pruebas que para ello tenia, habiendo escribió al rey, en el que le decia que
enviado en comision para esto al prior por lo que se murmuraba, queria jun
de Gotor. tar sus papeles y los de aquel hombre
Que no habiendo sabido la volun para probar la verdad, y el rey le con
tad del rey, y siendo perentorio el testó que no era menester darle este
tiempo de defenderse, y obligarle á descargo.
ello su conciencia, lo hacia. Manifestó que aun cuando se halle
Pasa despues á tachar los testigos que escribió á don Juan de Austria y
que contra él han depuesto, y vindi á Escobedo que ponia y quitaba, lo ha
cándose de la infidelidad de que se le cia por convenir asi para asegurarles
acusa, muestra el sentimiento que de mas, para que fiasen en él, y poder
ello tiene, y opone como prueba de servir al rey.
ello los tormentos que por no faltar á Alegaba tambien que en el proceso
su lealtad ha ¿ de visita que se le habia hecho, se ha
Manifiesta que su fidelidad está bia formulado contra él el cargo de infi
comprobada en los papeles que dió al delidad y de descifrar malamente; por
confesor del rey, pero que sin em— lo cual fué sentenciado á una multa
bargo, previsoramente habia guardado crecida, la cual pagó, y que no podia
seis billetes, cuyas primeras y postre ahora volver á reproducirse ni agitar
ras palabras anota, y que no presenta, se un cargo ya juzgado.
sin embargo, todavía, por ser tan gran Manifiesta tambien que no tenia
de la confianza y favor que revelan. enemistad con Escobedo, y que le de
A la acusacion de que habia alte fendia con S.M. en todo, y especial
rado las cifras de algunos despachos, mente en los billetes atrevidos que le
COntesta º lo habia hecho, porque escribia. En prueba de esto, presenta
don Juan de Austria y Escobedo le ro— varios billetes en que S. M. le envia
gaban que templase y sazonase los des ba otros de Escobedo para que le dije
pachos como mejor le pareciese; y pa se qué era lo que le parecia y habia de
ra probar esto, presenta cuatro cartas responder, y alli está marcado en ellos
de don Juan de Austria y de Escobedo, sus respuestas, procurando templar el
ANTONIO PEREZ. 465
-

disgusto del rey; y éste le contesta que muerte de Escobedo. S. M. responde


haria lo que proponia; y en otro bille que esto dará mas que sospechar, y
te tambien se prueba el disgusto que que oportunamente se mandaria si hu
Escobedo causaba al rey, y el modo biese cosas secretas. Dice que quiere
con que procuraba dorárselo Antonio ir á donde S. M. está, y S. M. respon
Perez. de que dará mas que sospechar, y que
Tambien presentaba otro billete en ha de venir al parto de la reina: y
que S. M. le decia que no tuviese pe
S00.
imº
en lo que Perez dice se halla
sadumbre de lo que se trató en una
casa de su acusacion y del perjuicio Mostraba otro billete donde Anto
que podria traerle. Le daba conoci nio Perez da razon á S. M. de lo que
miento de la determinacion que habia pasó un dia con el alcalde Velazquez,
formado para que no entrasen muchas S. M. le avisa del memorial que
personas en aquel negocio, y que si le ha dado el hijo de Escobedo, ha
queria mostrar á aquella persona los ciendo relacion de que teme que de
papeles lo hiciese; que para el rey no Flandes ha procedido la maldad de su
era menester sino seguir por el cami muerte. Decia al rey que despachará á
no que habian antes concertado y le los hombres, y S. M. le responde que
encargó que se esforzase en ello. sea por caminos desviados de la raya
Presentó tambien otro billete en de Aragon, y que el que tenia en su
que prueba dieron á S. M. ciertos pa casa no le envie porque no dé que sos
peles sobre el negocio de Escobedo, y pechar.
el rey le dice que le avisaria de lo que En otro billete dice S. M. á Antonio
contenian y le preguntaba si seria Perez las diligencias que se hacen por
bien remitírselos al presidente del los alcaldes.
Consejo de Castilla. Presentaba otro con la respuesta,
Otro billete tambien mostraba en en el que Antonio Perez dice el medio
que decia que no habia podido escri que le ha comunicado el presiden e de
bir al presidente; que le enviaba un Castilla de que se mande callar á Es
plieguecillo; que le vea y hable para que cobedo, diciendo que ya se sabe quien
comunicándolo con el marqués de los mató á su padre, aprovechándose de
Velez, ó con quien le dijere, vea lo lo que el verano antes se dijo de que
ue convendrá; que ha visto cartas los mismos querian matar á Francisco
Italia y puesto en ellas lo que le ha Valdés. Y dice Antonio Perez que no le
parecido: que si falta algo lo supla An parece buen medio; y S. M. le respon
tonio Perez como suele. de que comunique al presidente los
Presentó tambien Antonio Perez medios que á él le parecen, y que le
otro billete en que se quejaba al rey encarga que busque alguno bueno por
de estar juntos Escobedo, Mateo Vaz que es menester hallarle. Se queja á
quez y el presidente, y el rey le dice S. M. de que el hijo de Escobedo le
que todo aquello va encaminado al re espera de noche, y S. M. le dice que
medio del negocio y para su sosiego. no salga de noche y que lo diga al pre
Tambien presentaba otro billete sidente para espiarle y echar mano de
que avisa de su llegada á Madrid, en él por este camino.
el que cuenta lo que le ha pasado con Presentaba tambien otro billete de
Robles y los alcaldes Hernan Velaz Mateo Vazquez á S.M. en que le dice
quez, Gimenez Ortiz, Escobedo el mo que crece en el pueblo la sospecha con
zo y su madre; y aprueba S. M. todos tra aquel secretario de la muerte del
los desvios y escenas que dió de la otro; y que anda con temor despues
muerte del secretario Escobedo, y par que se hizo un juicio de que le hizo
ticularmente avisa á S. M. de no ha matar un amigo suyo y por una mu
berse ido aquella gente y que los quie ger: y que el dia que entró la muger
re despachar. de Pérez á visitar á la de Escobedo,
S. M. le responde que no lo haga empezó esta á gritar maldiciendo á
por aquellos dias que no den mas sos quien lo habia hecho, y que conviene
pechas. Pide que solo un alcalde se se averigüen las causas que tuvo para
encargue de la averiguacion de la eSt0,
166 CAUSAS CELEBRES,

S. M. envió á Antonio Perez es e bi de la córte haciendo dejacion de sus


llete de Mateo Vazquez para que lo co destinos.
municase al marqués de los Velez Que S. M., por medio de la prince
respondiese á él; y con otro billete sa de Eboli procuró el que se quedase
envian á S. M. minuta de lo que ha de y que el cardenal de Toledo la llevó la
responder á Mateo Vazquez, y es que aprobacion de Perez diciendo á S. M.
S. M. sabe de dónde procedió este caso ¿ mandase y que asi lo haria, que
y diese un desvio algo desabrido á Ma ando el rey muy satisfecho.
teo Vazquez. Que al rey no le pareció bien pren
. Presentaba tambien cuatro cartas der á Escobedo por ser secretario de
del presidente Pazos en las que dice su Consejo sino castigarle secretamen
le consta ser órden de S. M. la muerte te con la muerte.
de Escobedo. Decia que tenia por juez apasionado
Por último presentaba dos cartas á Rodrigo Vazquez, que le dió tor
del confesor fray Diego de Chaves, en ment0.
las que le aconseja con diversas razo Que habia sido un yerro de su pro
nes que confiese lo que pasó en la curador el decir que estuviese conde
muerte del secretario Escobedo, pues nado por lo de descifrar en falso y la
conviene para su descargo y para los infidelidad, porque del mismo proceso
demas que por ello padecen, sin decir resultaba la inmunidad y limpieza con
las causas que hubo para que se le que habia procedido en todo: que Fui
mandase intervenir en esta muerte ca y Escobar eran los que descifraban
porque de ellas no se ha de tratar. y están de sus letras las cartas desci
Presentó á muy pocos dias Antonio fradas. -

Perez una segunda cédula de defensa Los billetes de la primera cédula


con gran multitud de cartas, billetes que citaba para probar la confianza que
y documentos en la que confesaba Pe tenia en él el rey y que no presentó,
rez que el rey le habia dado la órden los exhibia ahora. Estos billetes eran
para matar á Escobedo. varios y contenian de puño y letra de
Probaba que por el billete que se S. M. indicaciones en que le decia: es
le mostró cuando se le dió tormen— te asunto se debe suprimir, este otro
to, el rey se habia hecho autor de la debe alterarse, este otro referirse al
muerte. Consejo, etc.; y de estas presenta hasta
Pretendió probar que por un bille veinte documentos en los que con las
te donde S.M. le decia que convenia mismas notas escritas del puño y le
abreviar lo del verdinegro, le daba ór tra del rey, comprueba hasta la evi
den de matar á Escobedo. dencia que para las alteraciones que
Dijo que lo podria tambien probar habia hecho en los despachos de las
¿ otros billetes, y pues ¿ se le ha cifras se hallaba autorizado por el
ian ocupado sus papeles debia pasar mismo rey y tambien por los mismos
se por su juramento. personages de quienes eran las comu
Pretendió probar que S. M. llama ll Cl (21000.S.
ba á Escobedo el verdinegro efecto del El abogado fiscal, el 28 de junio,
color de su rostro, y que bajo este pidió copia de esta cédula y de los bi
nombre le designaban mútuamente. lletes que habia exhibido Antonio Pe
Presentó dos billetes de Escobedo rez para su defensa, y al remitirlas al
donde trataba de su enfermedad, y le rey hacia presente que habia necesi
preguntaba si habia nuevas para que dad de nombrar un comisionado que
las escribiese á Flandes , ¿ pasase á Madrid para averiguar y com
nuestro amo á don Juan de Austria: y probarlos; y que como no sabia qué
el rey Felipe II le respondia acerca de juez habia de ir de Madrid, lo prevenia
esto que andaba Escobedo al tono de á S. M. para que pasando los ojos por
Octavio y que no solo quiere que don los billetes, viese lo que habia de res
Juan de Austria fuese su amo, sino ponder acerca de que la muerte de Es
tambien de Perez. cobedo habia sido hecha por órden su
Que viendo Antonio Perez los ene ya: que para dar las réplicas á esta de
migos que tenia, trató de marcharse fensa no habia mas que cinco dias des
ANTONIO PEREZ, 467
g =-e

pues de que se hubiese publicado la «In Dei nomine.—Sea á todos ma


probanza de Antonio Perez; pero que nifiesto que nos Don Felipe por la
él se reservaria unos quince ó veinte gracia de Dios, rey de Castilla, de
mas; que sobre todo le remitia dos bi Aragon, de Leon, de las Dos Sici
lletes, que eran los que aparecian de lias..... etc., atendido y considerado
mas consideracion. que en virtud de un poder que como
Habiendo pasado el rey esta comu rey de Castilla mandé despachar en
nicacion á la junta que entendia en favor del magnífico y amado consejero
los negocios de Perez, no dejó de alar el doctor Hierónimo Perez de Nueros,
marle y ponerle en cuidado las revela nuestro abogado fiscal en el reino de
ciones que iba haciendo, en tales tér Aragon..... se dió demanda y acusacion
minos que encargaba mucho á aque criminal contra Antonio Pérez en la
lla junta viese el medio de evitar el córte del Justicia de Aragon sobre la
que se presentasen estas en el pú muerte del Secretario Escobedo, des
blico. cifrar falsamente y descubrir secretos
Entonces la junta recomendó al rey del consejo de Estado, y otros cabos
que convenia separarse de la causa de que se contienen en el proceso que so
Ántonio Perez, encargando muy viva bresto está pendiente, y habiendo sido
mente al regente de la audiencia de preso por mi parte, se hizo la provan
Aragon que activase la formacion de la za necesaria y por la del dicho
causa que se seguia al mismo Perez por Antonio Perez se dió su cédula defen
la muerte de Pedro de la Hera, con lo siones y se procuró probarlas, y asi
que se aseguraba su prision: que por como son públicas las defensiones que
la poca cuenta que los lugar-tenientes Antonio Perez ha dado, lo pudiera ser
del Justicia de Aragon habian tenido la réplica dellas, y fuera bien cierto
con ella, á pesar de habérsela reco º no hubiera duda en la grandeza
mendado mucho la córte, porque tra e sus delitos, ni dificultad en su con
taban de poner en libertad á Perez ba denacion por ellos; y aunque mi de
jo fianza, eran de opinion de que se les seo en este negocio fué encaminado
debia reprender. como en los demas á dar la satisfaccion
Conformándose el rey con el dic general que yo pretendo, y esta ha
támen de esta junta, y para calmar la sido la causa acá de su larga prision,
alarma en que le habian puesto los do y de ahi haberse llevado estas cosas
cumentos originales que habia presen por la via ordinaria que se han segui
tado Antonio Perez, y que habian cau do; pero que abusando Antonio Perez
sado gran sorpresa y asombro al tri desto y temiendo el suceso, se defiende
bunal del Justicia mayor, dió el rey un de manera que para responderle seria
decreto el 18 de agosto de 1590 en San necesario de tratar de negocios mas gra
Lorenzo del Escorial, apartándose del ves de lo que se sufre en procesos públi-.
proceso de Antonio Perez, declarando cos, DE SEcRETos QUE No CoNVIENE QUE
reservarse libre su derecho para per ANDEN EN ELLos, y de personas cuya re
seguir al delincuente, en cualquier otro paracion y decoro se debe estimar en
tribunal y tiempo que le pareciese mas que la condenacion de dicho Anto—
oportuno; reserva que demostraba to nio Perez, he tenido por menor inconve
da su saña impotente y el miedo de niente dejar de proseguir en la córte del
que se diesen al público y conociese el Justicia de Aragon su causa que tratar
mundo sus tenebrosos proyectos, ha de las que aqui apunto: y pues la inten
ciendo desaparecer las sombras que cion con que procuro proceder es tan
ocultaban al autor del asesinato de Es sabida como cierta, aseguro que los de
cobedo hacia doce años. lictos de Antonio Perez son tan graves,
Este documento es sumamente im cuanto nunca vasallo los hizo contra
portante, es poco conocido, y vamos á su rey y señor, asi en las circunstan
trascribirle literalmente (1). cias dellos como en la conjetura, tiem
po y forma de cometellos; de que me
(1) Ilistoria general de España de don Mo ha parecido es bien que en esta sepa
desto de Lofuente, sacado del archivo de Si racion conste, para que la verdad en
IIlalC38, - ningun tiempo se confunda ni olvide,
168 CAUSAS CELEBRES.
-2

cumpliendo con la obligacion que co se habia seguido por doce años, cre
mo rey tengo. Por tanto, en aquellas yeron todos por un momento que el
mejores vias, modos, formas y mane perseguido ministro obtendria su li
ras..... etc., mando que se separen y bertad, y á punto estaba ya de obte
aparten de la instancia y acusacion nerla y decretarla el tribunal del Jus
criminal y pleito que en mi nombre ticia mayor, cuando se dió nueva comi
tienen en la córte del Justicia de Ara sion para que el doctor Urbano Jimenez
gon contra el dicho Antonio Perez so de Aragües, que era entonces regente
bre la muerte del dicho secretario Es de Aragon activase la causa que pen
cobedo, y sobre todos los demas cargos dia en la audiencia real sobre haber
que se le han impuesto por mi procu dado veneno y quitado la vida Perez á
rador ó procuradores fiscales tocantes Pedro de la Hera, su amigo, con el ob—
á la fidelidad de su oficio y á otras jeto de que no se descubrieran los se
cualesquier causas y cabos, demanda cretos y confianzas que le habia hecho,
contra el dada en el dicho proceso ar causa que empezó en Madrid y que
riba intitulado, y que en él no hagan hemos dicho ya haberse remitido á
mas parte ni instancia, ni diligencias, Aragon.
sino que del todo se aparten y sepa Al mismo tiempo el marqués de
ren del, la cual separacion y aparta Almenara, por órdenes de la córte
miento quiero y es mi voluntad que preparaba en la parte esterior de la
los dichos mis procuradores hayan de cárcel de la Manifestacion todos los
hacer y hagan , con cláusula, ¿ medios para que no pudiese escapar
tacion y salvedad de que queden ansi se de ella Antonio Perez, teniendo
i, á mis procuradores en cualquier tri apostada constantemente gentes de
unal del dicho reino salvos é ilesos confianza que le vigilasen, y aun puso
todos y cualquier derechos que contra delante de la puerta un capitan de to
el dicho Antonio Perez me pertenez- da su devocion con algunos soldados.
can, ó me puedan pertenecer cevil ó ... Muchos eran los medios de que po
criminalmente, como contra criado y dia disponer el rey, y estaba dispues
ministro mio, ó como á rey contra su to á apurarlos todos para acabar con
vasallo, asi en nombre del rey de Cas-Antonio Perez.
tilla como de Aragon, de ambas partes Cuando todos veian que aun des
y de cada una de ellas, tam conjunctim pues del desistimiento del rey se con
quam divisim y en otra cualquier parte tinuaban los procesos de Antonio Pe
y manera que pueda tener derecho rez se aumentó la compasion hácia él.
contra dicho Antonio Perez, por via . Perez imploraba en los consistorios
de acusacion ó en otra cualquier ma- el oficio de la justicia; y no dejaba de
nera á mi bien vista, pedirle cuenta y inculcar á las personas particulares,
razon de los dichos delictos..... el cual á los eclesiásticos y religiosos, y al
derecho quiero que me quede salvo é pueblo, que en él se querian violar las
illeso..... Y para que conste de mi vo-leyes y privilegios de Aragon.
luntad y de lo que en este negocio pa- Uno de los jueces, ante quien se
sa, y de las causas que á la separacion puso la acusacion contra la muerte de
me mueven y de la manera que soy Pedro de la Hera renunció su oficio;
servido que se hagan quiero que este y fué voz pública que lo habia hechó
poder quede inserto á la letra en la por no tener ánimo de condenarle, ó
separacion que por mí se hiciere, , y mas bien por no disgustar al rey ab
puesto en el proceso que por mí se ha solviéndole.
activado y llevado contra el dicho An Para aumentar mas la compasion
tonio Perez, en testimonio de lo cual decian los amigos de Antonio Perez
mando despachar la presente con que estaba tan pobre que no tenia pa
nuestro sello real comun pendiente se ra comer, y para hacer ver de un mo
llada.—Yo EL REY.» do palpable esta necesidad iban los
religiosos y otras personas de su de
Separado el rey con gran solemni vocion pidiendo limosna por las casas
dad á la faz de la nacion y del mundo para el pobre Perez.
de la causa que con tanta insistencia Las mugeres tenian muchísima com
ANTONIO PEREZ. 469

pasion de él y le llevaban grandes so Era el empeño del rey que ya que


corros, é incitaban á los hombres á su no pudiese ser sentenciado alli á la
defensa diciéndoles que en aquello pena de muerte, se tratase del modo
consistia la libertad pública. de sacarle de Aragon y traerle á Cas
El rey no satisfecho de que pudie tilla. Para esto dirigian todos sus pa
se ser condenado por la muerte que se sos y conatos á que fuese condenado á
le acumulaba de Pedro de la llera, y destierro á cualquier punto que fuese,
cuya causa se dirigia paso á paso por lo cual les importaba poco, porque en
la junta establecida en Madrid, hizo cualquier otro punto que no fuese el
que se entablase contra él un juicio que reino de Aragon, el rey podria echarle
en Aragon se llamaba el juicio de en la mano.
questa, derivado de inquisitio, juicio Seria una cosa interminable el re
contra los que han ejercido algun car ferir aqui todas las consultas que me
go público y sobre el modo de des diaron entre la junta nombrada por el
empeñarlo. ¿? aconsejarle y dirigir el nego
ste juicio equivalia á la visita ó cio de Antonio Perez, y las respuestas
residencia en Castilla, la cual hemos escritas de puño y letra de este mis
visto el éxito que tuvo, y el modo co mo soberano. Publicadas están la ma
mo fué conducida por los jueces para yor parte de ellas en los tomos XII
condenar á Antonio Perez. XV de la Coleccion de documentos
En este juicio se acusaba á Antonio inéditos de la Academia de la Historia.
Perez de los mismos cargos que se le La junta de Madrid, el 20 de se
habian hecho en Madrid, cargos por tiembre, aconsejaba al rey que procu
los que le habian sentenciado, y hasta rase despachar á Antonio Perez de
se habia ejecutado la sentencia como cualquier manera, diciendo: «Pues no
hemos dicho. Se añadia sin embargo en se debe reparar en la ejecucion de su
juicio un cargo mas: inteligencias con condenacion, en caso de que no se pue
el rey de Francia, y proyectos de fuga
da hacer por la via ordinaria: porque,
al estrangero. s á cualquier particular, conforme á
Antonio Perez opuso la escepcion derecho, le es permitido el matar á
de estar ya juzgado y sentenciado en cualquier foragido ó bandido á quien
Castilla, dºnd habia dado sus descargos la justicia ha condenado y que no pue
ante la justicia, y donde podia presen de haber á las manos, mucho mas líci
tar papeles de la mayor importancia y to le será á V. M. mandar ejecutar por
de negocios mas delicados; que no de cualquier via su sentencia contra quien
seaba escándalos, pero que no omitiria anda huido.»
medio alguno para su defensa; que no Y mas abajo añadia: «para el buen
le competia la enqüesta, porque el po gobierno y estado de las cosas suelen
der absoluto no le tenia el rey en Ara usar los príncipes de remedios fuertes
gen, sino sobre sus criados y oficiales y arbitrarios, por ley de buen gobier—
aragoneses y de oficio, y ministerios no, en caso de que por las vías ordina
del rey de Aragon, en cuanto rey de rias no se pueda conseguir el castigo
Aragon, en cosas de Aragon. que conviene se haga.....» Y luego mas
l fiscal decia que el Consejo de abajo añadia tambien: «que no faltan
Estado comprendia á toda la monar medios para la dicha ejecucion, y cuan
¿ y por consiguiente al reino de
ragon, y que habiendo sido Perez mi
do el caso sucediere se podria tratar de
espedientes.»
nistro de Estado se debia contar entre El rey estuvo conforme con la pro
los ministros de aquel reino. El objeto puesta de esta junta y al márgen de
era apoderarse de Antonio Perez: los la consulta se lee de su puño y letra:
medios importaban poco. «Será bien que se mire todo lo que se
Asi es que en Madrid y en Zaragoza debe hacer conforme á lo que aqui se
se seguia una correspondencia directa ¿? parece. A lo que se dice que
con el rey, sin omitir medio alguno, ni cuando el caso sucediese se podrá tra
perdonar manejo de cualquiera espe tar de los espedientes, me parece que
cie, para que de uno ú otro proceso re seria mejor tratarlo luego de estar re
sultase culpable Antonio Perez. suelto á lo que se será
hacer en cual
70 CAUSAS CELEBRES.
-
-

quier caso que suceda, y se conviniese ciere que no merece tanta pena, podrá
tener prevenido lo que para ello fuere dársele la de confinarle en alguna
menester, pues despues podria ser que fortaleza, como la de Oran, ú otras de
no fuese tiempo aunque se quisiese.» las de V. M., de donde V. M. podrá
Repetimos que la preocupacion con mandalle traer con la ocasion de pedi
tínua y constante del rey, todo su de lle cuentas, y proceder á apurar sus
seo y el de sus agentes, era que Anto culpas, sin que nadie lo estorbe.
nio Perez pudiese ser traido á Castilla. » La tercera forma de condenacion
Por eso todas sus gestiones tendian á parece forzosa, porque ¿ poca pro
arrancar una sentencia á los tribunales VaI)Z8 haya de sus delictos, por lo
de Aragon, que le condenase á ser re menos la habrá para que sea condena
cluido en un punto cualquiera de don de Antonio Perez á algun destierro de
de el rey pudiese sacarle y traerle. Aragon , perpétuo ó temporal. Esta
El 4 de octubre dirigió la junta una sentencia se ejecutará por el juez de
consulta al rey, en la que se revelan enqüestas, sacándole á ¿? y á sus mi
completamente , y de la manera mas nistros del reino de Aragon á cumplir
palpable evidente estos proyectos. su destierro, dejándole en la raya de
Decia la junta al rey: Que en el Castilla, donde V. M. podrá mandar
caso de que por la via ordinaria no pu hacer de él lo que fuese servido, y se
diese conseguir el rey el que se traje ha usado en remision de presos de Na
se á Madrid á Antonio Perez, debia de varra á Aragon, que poniéndolos en la
mandar tres cosas: raya de Navarra estaban en la de Ara
La primera que se le avisase de los gon los oficiales de aquel reino, y los
espedientes que podia haber para este prendian. Y aunque segun esto parece
caso que no hubiese forma de hacer que el tratar de los demas medios es
justicia á Antonio Perez por la via or traordinarios es caso que no puede su
dinaria. ceder conforme al estado de los asun
La segunda si habia medios para tos y guardando en ellos justicia, pero
que fuese remitido á Madrid. por si alguna via sucediese lo contra
Y la tercera, lo que toque al encar rio, presupuesto que V. M. tiene el
gar la guarda de Antonio Perez, de parecer de grandes letrados y de jus
manera que no haya descuido en ella, ticia, habian los jueces de Aragon de
aunque pase á otra cárcel del juez de remitir á Antonio Perez á Castilla,
las enqüestas. donde delinquió, para castigarle segun
Se proponia que el regente Jime sus culpas, sin haber en ello quiebra
nez avisase cuando tuviese hecho y y rompimiento de fueros. Y demas
concluido el proceso de Antonio Perez, de esto estando condenado á muerte
para que viniese con él á Madrid á dar por los delitos º aqui tiene cometi
razon al rey, con lo cual se conseguian dos, y que ha ido de la cárcel al reino
todos los fines que se podian desear: de Aragon, donde los jueces no acuden
porque no se hallaria el negocio en á remitirlo, pudiéndolo hacer, para
confianza de su deliberacion sola, sino que se ejecute la sentencia que contra
que el rey se informaria oyendo el pa él está dictada, parece que sin escrú
recer de personas graves. pulo ninguno puede V. M. procurar
Discurriendo sobre el negocio, la por los medios ordinarios, y si estos
junta advierte que la sentencia es for no alcanzan, los estraordinarios, el que
zoso que sea en una de tres ma se consiga el fin de traerlo á Castilla
In69l'aS. -
donde delinquió.»
«La primera es condenando en la Y despues entra la junta en con
pena de muerte á Antonio Perez, y si sulta y en detalles sobre los medios
esto se consigue no habrá que tratar como podrian llevarse á efecto estos
de otro, pues habrá salido cumplida proyectos.
mente con el castigo que se pretende, En esta consulta, á que segun su
de la sentencia que asi se le diese no costumbre contestaba el rey de su
ay recurso en la córte del Justicia de puño y letra párrafo por párrafo, es
Aragon. cribió Felipe II al márgen una comple
»La segunda es, que cuando pare ta aprobacion. -
ANTONIO pEREZ. 474

Seguido con actividad el proceso de Notificada la firma podian las per


la enqüesta, se concluyó, publicó el sonas á quienes se les inhibia del co
fiscal su acusacion, y se dió de ella el nocimiento de un proceso ó causa,
traslado á Antonio Perez por término usar de varios medios para evitar la
de diez dias para que se defendiese. inhibicion. El mas eficaz, el mas pron
Comenzó á correr este término el 9 de to, el mas natural era el de la revo
febrero, pero Antonio Perez, no quiso cacion de la firma; el que se podia in
hacer ningun descargo, habiendo in tentar en todo tiempo, valiéndose de
terpuesto anteriormente y con repeti las fórmulas que el mismo fuero es
cion el juicio de la firma con el objeto tablecia. Se ¿? por medio de
de embarazar la enqüesta; pero los procurador el inhibido en el tribunal,
jueces hablados por el marqués de Al refiriendo la firma que se le habia no
menara se la habian negado, y él ha tificado, y alegando haberse despacha
bia vuelto á reproducirla nuevamente do nulamente por falta de alguna so
habiendo conseguido de cinco firmas lemnidad, ó por alguna circunstancia
que habia pedido, una. que se requiriese en el tribunal para la
El juicio de la firma es uno de los provision de la firma, y en su conse
cuatro juicios privilegiados que se co cuencia pedia la revocacion. La audien
nocian en los fueros de Aragon, á sa cia daba traslado y pasaba los autos al
ber: firma, aprehension, inventario, y firmante, y terminado con su respues
manifestucion. Ya hemos visto en que ta el espediente decretaba si ha lugar
consístia el juicio de la manifestacion. ó no á la revocacion de la firma.
Pues el juicio de la firma no era mas que Entretanto, viendo el marqués de
un interdicto ó decreto que espedia Almenara, agente incansable del rey en
el Justicia por el que se inhibia y ve Aragon, activo ejecutor ademas de las
daba el molestar y turbar al que lo ob órdenes que se le comunicaban de la
tenia en su derecho, persona ó bienes. junta establecida en Madrid para en
Llamábase firma este decreto, por tender en la causa de Antonio Perez,
que para obtenerlo afirmaba, y asegu que el juicio de la enqüesta se con
raba con fianza el que la pedia que es cluia, consultó con el asesor y abogado
taria á derecho en aquel tribunal. fiscal lo que deberia hacerse para en
Dividíase el juicio de la firma en fir el caso de que, ó bien por la causa de
ma de agravios tenidos, y firma de agra la enqüesta, ó bien por la que con ac
vios hechos. Esta última se hallaba ya tividad se le seguia sobre la muerte de
desconocida. La de agravios tenidos Pedro de la Hera, se diese alguna sen
era ó comun ó casual. Era la comun tencia.
aquella en que generalmente se inhi Consultó, pues, con Micer Torralba,
bia á todos los jueces seculares del uno de los tenientes del Justicia de
reino el que contra derecho y fuero Aragon los cuatro puntos siguientes:
turbaran ni molestasen al que inten 1." Si despues de condenado Anto
taba este recurso en sus derechos, nio Perez á muerte, ó á otra pena, y
persona ó bienes. Y la casual era entregado ya al comisario para ejecu
aquella en que se inhibia el molestar tarla, seria bien que S. M. revocase
al que interponia el recurso en una co de comisario al regente, y nombrase
sa especial. otro que aunque natural de Aragon no
Estos recursos de la firma se sub tuviese que perder, y que éste sacase
dividian tambien en simples, porque se á Antonio Perez, con lo cual el regen
obtenian con la sola caucion de estar á te quedaria descargado.
derecho en la justicia de Aragon y otras Respuesta. Que aunque por este
motivadas, porque al pedirse se alega medio fuese traido á Castilla Antonio
ban ante el Justicia de Aragon un Perez y el regente quedaria descarga
conjunto de escepciones y defensas do, se daria ocasion á grande senti
relevantes, capaces de estinguir ó sus miento del reino por llevarle de las
pender cualquiera obligacion. De esta cárceles sin estar remitido, y haber
última clase eran los recursos de firma tanta duda en que pueda serlo ó no;
ue interponia Perez ante el tribunal ademas de que seria desautoridad que
el Justicia mayor. en la córte del Justicia condenasen al
172 CAUSAS CELEBRES.
-====

comisario por hacer lo que S. M. le Para esto habia vuelto á establecer


mandó. nuevas firmas, y le habia sido denega
2.º Que si habiéndole condenado á da por el regente de la audiencia la so
muerte podria dar S. M. una cédula en licitud de libertarse. Entonces trató de
que mandase al comisario que no eje fugarse.
cutase la sentencia hasta que otra cosa Intentó escaparse Antonio Perez;
se le mandase, y que en el interin se pero descubierto, se trató de ponerle
pusiese la persona de Antonio Perez grillos en la prision, á lo que en un
en la Aljafería, ó en la Fuerza de Te principio se resistió vigorosamente el
ruel, y de alli traerlo acá. Justicia mayor, si bien despues mas
Respuesta. Que bien puede S. M. tarde cedió, mandando tambien que no
mandar suspender la ejecucion de la le visitase nadie y durmiese dentro de
sentencia; pero que el poner al preso su aposento uno de los guardas, y pu
en el ínterin en una fortaleza tiene siesen maderas en el suelo de la habi
mucha dificultad conforme á fuero. tacion en que estaba, y en la que se
3.º Que si podria condenarle á pri hallaba encima se colocasen presos de
sion perpétua en la fortaleza que S. M. ligeros delitos.
mandare, con conminacion de muerte Al mismo tiempo trataron de bus
si la quebrantare, diciendo que aunque car el medio de sacarle de la cárcel de
era digno de mayor pena, por usar los manifestados, de donde á pesar de
S. M. de su clemencia, le condena en la guardia interior y esterior, que ofi
la dicha con motivo de haberse queri ciosamcnte hemos dicho tenia puesta el
do ir á Bearne. marqués de Almenara, temian pudiese
Respuesta. Que se puede hacer co en un momento de descuido escapar—
mo se dice en este tercero cabo; advir se. Era, pues, su objeto trasladar
tiendo que la fortaleza en que sea re le á la cárcel de la Inquisicion, donde
cluido esté dentro del reino. una vez dentro, quedaba enteramente
4.º Que en cumplimiento de lo di bajo la mano y el poder de Felipe lI.
cho se podria poner en el fuerte de Te Para esto trataron de formular una acu
ruel, ó en la Aljafería, de donde seria sacion con datos que seguramente se
fácil traerlo á Madrid. resistiria uno hov á creerlo si no estu
Respuesta. Que condenándolo es— viesen consignados en documentos au
to de á reclusion, es cierto que S. M. ténticos de aquella época. Como la fu—
le podrá señalar la fortaleza que fuese ga que intentó Antonio Perez con su
servido dentro del reino, aunque sea secretario el genovés Juan Francisco
la Aljafería, como sea por pena en eje Mayorini, era á Francia, al Bearnés,
cucion de la sentencia, y no por pri pais donde habia muchos hereges, sa
sion en el ínterin. caron la consecuencia de que era sos
El marqués al comunicar al rey la pechoso de heregía. El proyecto de Pe
resolucion de estas dudas, se inclina rez, que llevó á cabo mas tarde, era el
ba á que Antonio Perez fuese puesto ir á ampararse del rey Enrique IV de
en la Aljafería, de donde podria sacar Francia y de su hermana. Valiéronse
se y traerse cuando se quisiese. tambien en la informacion secreta que
El juicio de la enqüesta fué decla para preparar la prision disponia el re
rado improcedente al fin, por el jurado gente Jimenez, hasta de las espresio
de los veinte, y que ningun derecho nes que en los momentos de impacien
tenia el rey contra Perez, condenando cia y desesperacion se escapaban al
en las costas al que promovió el juicio. desgraciado ministro; espresiones que
Apenas se veia libre de esta nueva si bien son blasfemas, suelen usarse en
persecucion Antonio Perez, quedándo los momentos de apuro para espresar
le solo pendiente el proceso sobre el el mal humor, la ira y la desespera
asesinato de la Hera, cuando de repen cion. Refiere algunas de estas Llorente
te se vió envuelto en otro mas grave. en su historia de la Inquisicion, y en
Por consejo de sus letrados habia tre otras la de: «bueno es que despues
intentado marcharse donde no le al de ponerme el rey en demanda y tan
canzase la accion del rey, y donde pu to aprieto diciendo que yo descifraba
diese verse libre de sus enemigos, falsamente y revelaba secretos, repare
ANTONIO PEREZ. 173
-
-Er

yo ahora en la honra de nadie para dependencia; ante la Inquisicion ce


mostrar mis descargos. Si Dios Padre saban todos los privilegios y los reos
se atravesara en medio, le romperia las podian ser arrancados de la cárcel de
marices, á trueque de hacer bueno cuán la Manifestacion.
villano caballero ha sido el rey con-. Sin embargo, el licenciado Molina
migo.» de Medrano, inquisidor de Zaragoza,
Agregáronse otras acusaciones sa- contestó á la órden de la Suprema, que
cadas de las declaraciones de un cria—, le mandaba prender á Antonio Perez
do que habia tenido en los tiempos de y á Juan Francisco Mayorini, manifes
su prosperidad, y en que venia á acu-tando que hallándose presos los reos en
sarle del crímen de sodomía. la cárcel de la Manifestacion, que era
Antonio Perez era demasiado sagaz la mas privilegiada de aquel reino con
para no advertir, á pesar del sigilo con forme á sus fueros y leyes peculiares,
que se envolvia, la acusacion que pre necesitaba dar el mandamiento de pri
paraban y la manera con que la trama sion con penas y censuras contra el
se urdia. Asi es que acusó de cohecho Justicia mayor y sus cinco lugarte
y soborno en los testigos que habian nientes que con él formaban su tribu
declarado sobre sus proyectos de fuga, nal, y que sin esta cualidad y manda
cuya justificacion se practicó ante el miento no seria obedecido: que le pa
justicia ordinario y tuvo por resultado recia que constando de tres inquisi
dores el tribunal, si la provision iba
desdecirse cuatro de los testigos, uno
firmada por uno solo de ellos no seria
de ellos in articulo mortis, y manifes
tar que habian sido amenazados y se obedecida; y que si el secretario del
tribunal daba fé de que in sólidum te
ducidos por el alcaide, Almenara y el
nia él la comision para proceder en
inquisidor Molina. Inútil fué esta jus
este negocio, seria una cosa sospechosa
tificacion; lleváronse adelante los pro
COS0S, á todos por ser muy reconocido el celo
El regente de la audiencia, Jime y el interés con que miraba al rey,
nez, entabló su acusacion ante el in por ser tan reconocido y declarado
quisidor Molina de Medrano, el cual criado suyo. Estas eran sus espre
remitió el proceso al inquisidor ge siones.
neral, cardenal Quiroga, y éste lo pasó El tribunal de la Inquisicion le
al confesor del rey, fray Diego de Cha contestó en el dia 21 de mayo que con
ves, como comisario calificador del siderando los inconvenientes que ha
Santo Oficio. bia representado para poner él solo en
La grande intervencion que en los ejecucion lo que se le mandaba de la
negocios de Antonio Perez hemos vis— prision de Antonio Perez y Juan Fran
to tomar el padre Chaves, las pocas cisco Mayorini, debia hacerlo todo el
luces y el fanatismo de este hombre, tribunal.
y sobre todo su mala voluntad con Pe Entonces los inquisidores de Ara
rez, hizo que en breve calificase las gon dieron un mandamiento á los lu
proposiciones de escandalosas, ofensi gartenientes del Justicia mayor en 24
vas á los oidos piadosos y sospechosas de mayo para que en virtud de santa
de heregía. obediencia y so pena de escomunion,
Entonces el consejo de la Inqui mayor, entregaran al alguacil del San
sicion mandó que Antonio Perez y to Oficio, Alonso Herrera, las personas
Juan Francisco Mayorini fuesen tras de Antonio Perez y Juan Francisco Ma
ladados á las cárceles secretas del yorini, que se hallaban presos en la
Santo Oficio, encargando que hiciese cárcel de la Manifestacion, revocando
todo con la mayor brevedad y dispu y anulando el privilegio de la mani
siese lo necesario para su ejecucion el festacion y cuanto pudiese impedir el
inquisidor Molina de Medrano. libre ejercicio de las funciones del tri
Gozoso estaba el rey con el espe bunal de la Inquisicion, conminando
diente que habia sabido encontrar el con proceder contra todo el que in
marqués de Almenara. Una vez preso tentara embarazar ó impedir su man
en la cárcel de la Inquisicion, Antonio damiento. - -

Perez se hallaba enteramente bajo su Este decia asi: - a


174 CAUSAS CELEBRES.

«Nos los inquisidores apostólicos revocacion á todos los oficiales de su


contra la herética pravedad y aposta córte, de manera que notoriamente se
sía en el reino de Aragon y su distrito entienda que ha sido revocada y qui
por autoridad apostólica dado y dipu tada con apercivimiento, que no lo ha
tados etc. Hacemos saber á los lugar— ciendo procederémos contra los dichos
tenientes de la córte del Justicia de lugartenientes y cada uno de ellos co
Aragon y á cada uno y cualquier de mo contra personas rebeldes é inobe
llos, que á instancia del promotor fis dientes á nuestros mandamientos, y
cal de la fée en este Santo Oficio, es que perturban é impiden el recto y
tan mandados prender Antonio Perez, libre uso y ejercicio del Santo Oficio y
secretario que fué de S. M., y Joan á los declarar por excomulgados y
Francisco Mayorin, natural de Géno ejecutar en sus personas é bienes y
va, por cosas concernientes á la fée, y de cada uno dellos las dichas penas.
que sus personas sean traidas á las Dat. en el Palacio Real de Alfaferia
cárceles secretas deste Sancto Oficio. á 24 del mes de mayo de 1591.—El
Y habiendo dado nuestro mandamien licenciado Molina de Medrano. —El
to dirigido á Alonso de Herrera algua doctor Antonio Morejon.—El licencia
cil, para que prendiese á los susodi don Juan de Mendoza.—Por mandado
chos, nos hizo relacion que por las di de los dichos señores inquisidores.=
ligencias que habia hecho, habian en Lanceman de Sola, secretario.»
tendido que los dichos Antonio Perez
y Joan Francisco Mayorin estaban pre Hallábase todo dispuesto para en
sos en la cárcel de Manifestados desta tregará Antonio Perez á la Inquisicion;
ciudad, y asi no habia podido ejecu iban á realizarse los deseos del rey;
tar el dicho mandamiento, por lo cual iban á tener cumplimiento los proyec
á instancia y peticion del dicho fiscal tos de la junta formada, en Madrid, y
mandarnos dar y dimos las presentes, ue dirigia paso á paso los asuntos de
las cuales lo sobredicho intimando y no ¿ El marqués de Alme
tificando á los dichos lugartenientes y nara habia conferenciado y logrado ga
á cualquier de ellos, exhortamos y re nar al Justicia mayor don Juan de La
querimos, y siendo necesario, , en vir nuza y parte de sus tenientes, para
tud de santa obediencia mandamos so que no se opusiesen á la traslacion de
pena de excomunion mayor trina, ca Antonio Perez desde la cárcel de la
nonican motione praemisa y de cada Manifestacion á la de la Inquisicion,
mil ducados para gastos estraordina situada en el castillo de la Aljafería.
rios deste Santo Oficio, y otras penas Hallábase don Juan de Lanuza el
á nuestro arbitrio reservadas, que den dia 24 de mayo á las diez de la maña
tro tiempo de tres horas que con ellas na en la sala de su consejo con sus
fueren requeridos, las cuales damos y cinco lugartenientes, Micer Gerónimo
asignamos por tres edictos y término Chalez, Micer Martin Bautista Lanuza,
perentorio dando y señalando una por Micer Juan Gazo, Micer Juan Francisco
el primero, otra por el segundo y otra Torralba y Micer Gerardo Clavería,
por el tercero y perentorio término cuando se presentó el secretario de la
den y entreguen, manden dar y entre Inquisicion, Lanceman de Sola, con la
gar realmente y con , efecto al dicho provision de este tribunal para el Jus
alguacil las personas de los dichos An ticia y sus lugartenientes, en la que
tonio Perez y Joan Francisco Mayorin reclamaba las personas de Antonio Pe
para que los traiga á estas cárceles, no rez y de Juan Francisco Mayorini, por
embargante cualquier pretensa mani hallarse acusados en cosas de la fé,
festacion de sus personas hecha y pro previniendo se las entregasen dentro
veida, que no puede impedir lo sobre del término de tres horas, contadas
dicho ni ha lugar en cosas tocantes y desde la presentacion de sus letras.
pertenecientes á la fée como estas son: Vista la provision de la Inquisicion,
y manden revocar y anular la dicha mandaron que el secretario se saliese
manifestacion como provision que im fuera, y á poco tiempo le volvieron á
ide el libre y, recto uso y ejercicio hacer entrar; y habiendo acordado,
¿ Santo Oficio y notificar la dicha despues de una ligera discusion, el
ANTONIO PEREZ. 176
- -

-
==e

obedecer el mandamiento, ordenaron con mucha mas gente que de momento


que se entregasen al secretario y al en momento se iba llegando. «Ya no
guaciles de la Inquisicion las personas hay que aguardar, sino hacer lo que se
que se reclamaban, por creerlo confor ha de hacer,» dijo uno de ellos, y se
me á fuero y á derecho. marcharon todos resueltos á encomen
El alcaide de la cárcel de la Mani dar á sus propias fuerzas el resultado
festacion, al ver la órden terminante de aquella cuestion que debia tener
del Justicia mayor, aunque con repug tanta influencia en la suerte de aquel
nancia, cedió y entregó las personas de reino.
los reos, que fueron trasladados en un Al salir del consistorio se dividió
coche desde la cárcel de la Manifestael pueblo en dos partes. Unos mar
cion á la de la Aljafería. charon á la Inquisicion gritando liber
Sin embargo del misterio y del si tad! y con las espadas desenvainadas
lencio con que se cuidó de ejecutar es reclamaban las personas de Antonio
ta disposicion, dos caballeros que pa Perez y de Mayorini, amenazando con
seaban por el Mercado, vieron á Anto que los sacarian si no se los entrega
nio Perez; siguieron el coche y comen ban; y otros dirigidos por Gaspar de
zaron á gritar contra fuero y libertad! Burces, zapatero, y hombre animoso,
Cual una chispa eléctrica cundió que habia pedido al doctor Juan Gazo
or todo Zaragoza la noticia de la tras una manifestacion para quitar la fuer
acion de Antonio Perez, y como por za que se hacia á un primo suyo, y con
encanto se reunieron millares de zara esta provision y los ministros de jus
gozanos que corrieron á las voces de ticia se dirigia á la casa del marqués
viva la patria, vivan los fueros! al pa de Almenara, donde dijeron que se les
acio de Diputacion aragonesa, don hacia fuerza, y determinaron acome
de se hallaba Lanuza con sus lugarte terla y cercarla, aprovechando aquella
nientes. ocasion de vengar en él el grande in
Don Diego de Heredia, don Pedro flujo que se le atribuia en la violacion"
de Bolea, don Ivan de Coscon y don del fuero, porque como han visto nues
Martin de Lanuza, caballeros de los tros lectores, era el que activaba todos
mas principales, y muy amigos de An los diversos trámites que habia llevado
tonio Perez, se pusieron á la cabeza del el proceso de Antonio Perez.
movimiento, y trataron de defender la . Habia corrido la voz de que un al
libertad y los fueros que creian atro guacil llamado Juan Martin, habia pre
pellados y ultrajados en la persona de so al primo de Burces, y que lo tenia
Antonio Perez. preso en la misma casa del marqués
Presentáronse, pues, seguidos de de Almenara. Burces, que era uno de
alguna gente ante el consistorio del los cabezas del motin, y el mas ardien
Justicia mayor; encontráronse con el te defensor de Antonio Perez, seguido
escribano ante quien habia pasado la de esta turba, fué con la provision del
entrega de Antonio Perez, el cual tra tribunal de Aragon, un portero y un
tó en vano de sosegarles y de decirles escribano del mismo, á sacar de aque
la verdad de lo que pasaba. lla casa el preso que decian que estaba
No se aquietaron, sin embargo; en dentro.
traron ante el tribunal del Justicia, y Presentáronse delante de la puerta
alli con palabras fuertes y altivas di del marqués de Almenara, que al ver
jeron que en aquella prision se habian el tumulto en que se hallaba el pueblo
uebrantado las leyes y fueros, y que se habia encerrado dispuesto á defen
¿ á tomar las armas en defensa de derse con sus gentes y criados. Los
las libertades del reino. criados del marqués resistieron con
El Justicia procuró templarlos con armas la entrada de la gente del pue
buenas razones, y hacerles ver que en blo; y entonces se quejó Burces, alegan
la prision de Antonio Perez no se ha do ante el Justicia el non tutus accesus.
bian roto los fueros del pais. El Justicia, avisado de lo que pasa
Tambien muchos de los diputados ba, determinó ir él mismo á casa del
acudieron al tribunal del Justicia, y se marqués de Almenara, acompañado de
encontraron alli con los caballeros y dos jueces de su tribunal.
176 CAUSAS CELEBRES.
-
-

Envió delante á uno, á Micer Tor tumultuariamente la instancia de que


ralba, y él se quedó detras para des sacase los presos, y le amenazaron con
viar la gente. Llegó á la casa, logró le que no saldria vivo si no los sacaba.
abriesen una puerta falsa, é hizo en El virey, que era el obispo de Tudela,
trar á los ejecutores de la provision rocuró calmarlos, prometió conseguir
que estaban alli. Pero aunque el tu— a libertad de Perez, y le dejaron en
multo se sosegó algun tanto, no desis trar, quedándose aguardando, aunque
tió la turba de su intento, y volviendocon grandes gritos y efervescencia, el
á continuar en él, el Justicia envió á cumplimiento de su promesa.
pedir auxilio y favor al virey y á los Continuaban las voces y la gritería
diputados; pero como la confusion iba delante del castillo de la Aljafería, que
creciendo, fué imposible en gran rato permanecia estrechamente cercado y
llegar á llamarlos, ni que viniese na á cada instante hacinando instrumentos
die, porque el virey que intentó llegar para el incendio.
allí no le fué posible verificarlo, y tu No bastó para calmarlos la populari
vo que quedarse en la casa del arzo dad de los condes de Aranda y Morata
bispo. ¿ se presentaron tambien despues
Alli acudieron tambien algunos ca el virey, á quienes recibieron como
balleros, y reunidos todos con el vi en triunfo, y á quienes encomendaron
rey y el arzobispo acordaron el activasen, la salida de Perez, y que
mejor medio para sosegar la poblacion tambien dejaron entrar; el pueblo pe
tan alterada, seria sacar á Antonio dia á voces y gritos desaforados que se
Perez de la Inquisicion. Para esto se pusiese en libertad á Antonio Perez.
dirigió el mismo virey en persona al El arzobispo desde la casa donde he
castillo de la Aljafería. mos visto se hallaba reunido con otros
El castillo de la Aljafería se halla caballeros, mandaba recado sobre re
ba cercado por el pueblo. Las gentes cado con algunos canónigos á quienes
amotinadas iban allegando fajos de se dejaba, entrar; pero el pueblo no
sarmientos, y cantidad de leña, re dejaba salir á nadie.
sueltos á quemar el edificio sino obte Deliberaban en tanto los inquisi
nian la libertad de Antonio Perez. dores bajo la presion del movimiento
Corrian entre el pueblo las voces mas popular; empero nada decidian y pa
absurdas, pero que servian sin embar saba el tiempo.
go para mantener vivo el fuego del en La parte del , pueblo que habia
tusiasmo popular que se mostraba en corrido á la casa del marqués de Al
tre imprecaciones atroces contra los menara seguia en su empresa de
inquisidores. - apoderarse de ella. Vociferaban mil
Decian que no eran ministros de denuestos contra el marqués mezcla
la Iglesia, sino instrumentos del rey, dos con vivas á la libertad y á los fue
y que la Inquisicion no habia sido ¿? ros, cantando los grupos por las calles:
mitida en Aragon sino por un tiempo
limitado, el cual habia pasado ya: que Viva la fé de Cristo
habian preso al reo, no por cosas de Y los fueros de Aragon,
religion sino por sacarle secretamente Muera el marqués de Almenara
del reino y llevarle á Castilla, que Con pelota y perdigon.
brantando los fundamentos de los fue
ros; y que para ejecutar este atentado Un esclavo negro del inquisidor
contra las leyes habian mandado hacer Morejon se habia escapado de la Alja
una jaula para poner al preso. fería, y borracho con un estoque en la
Estas y otras cosas corrian entre mano se presentó gritando: ¡Viva Cas
el alborotado vulgo, compuesto en la tilla, viva el marqués en un instante
mayor parte de labradores y de pe fué hecho mil pedazos.
laires, que no son como en otras par— Arreciaba el tumulto y en vano el
tes de España gentes sumisas y dóci Justicia mayor desde un balcon hizo
les, sino hombres valientes y atrevi entender á las turbas que habia ar
dos y de armas. restado á los criados marqués por
Al ver llegar al virey le hicieron la resistencia que habian opuesto.
ANTONIO PEREZ, 477
- =-e

Entonces el pueblo á grandes voces simas ropas diciendo públicamente que


pidió que la prision se hiciese en la él no se iba á vestir con telas de trai
persona del mismo marqués, á lo que dores.
contestó el Justicia para sosegar las El Justicia mayor, sus hijos y los
turbas, que tambien ya le habia ar— lugartenientes formaban escudo con
restado y dado por prision su propia sus cuerpos al marqués de Almenara
casa; mas entonces comenzaron á gri y sus criados mientras los llevaban por
tar diciendo: Tirarle, que tan grande el camino desde su casa á la cárcel.
traidor es el Justicia como el marqués. En vano los caballeros procuraban des
Y pidieron que fuese preso y llevado á viar el tropel de la gente que gritan
la cárcel pública. El Justicia les ofre do muera el traidor! querian echarse
ció llevarle si le prometian que podria sobre el marqués durante el tránsito.
asegurar la persona del marqués y de Con gran trabajo caminaban rom
sus criados. Asi lo prometieron. piendo por entre las embravecidas
Manifestó el Justicia que esperaba olas del furor popular. Al llegar á la
un coche para poderle conducir, y los puerta de la Seo se presentó el estu
grupos pidieron que fuese á pie. El diante Gil Gonzalez con otra turba
anciano Justicia mayor veia el peligro reforzar la que acompañaba con grito
en que se hallaba el marqués de Alme. y amenazas á los presos. Arrolla al Jus
nara por la escitacion febril en que se ticia que cae al suelo y es pisoteado por
hallaban los ánimos contra él, y pro las turbas, acércase á Almenara y le
curó exigirle que recomendase á los da dos cuchilladas, la una en la frente
inquisidores el dar la libertad á los y la otra en la mano, y ademas reci
presos, y tambien que procurase po be en la cabeza una ¿ pedrada.
nerse en franquía huyendo. Alli lo hubieran rematado á no haber
«Yo huir. Ninguno de mi linage se puesto delante y cubiértole con su
ha vuelto las espaldas,» dijo el mar— mismo cuerpo el lugarteniente Micer
qués resuelto á morir en su casa pri Torralba, que á grandes penas logró
mero que ceder á lo que el tumulto reorganizar la pequeña escolta que
exijia de él. protegia la vida del marqués, no sin
Indignadas en tanto las turbas al haber recibido él mismo una estoca
ver que tardaba en salir el Justicia da de las que iban dirigidas á éste.
mayor, á pesar de haber prometido lle El Justicia mayor en razon de su edad,
var preso al marqués, en lo que á fuer golpeado y magullado, no pudo conti
za de ruegos le habian hecho consen nuar y tuvo que retirrarse en una
tir como único medio de salvacion, mula porque no pudo ya marchar por
cogieron una viga enorme que habia su ple.
en el colegio de San Vicente para una El marqués de Almenara persegui
obra, y formando con ella un ariete, do con las vociferaciones de las turbas
derribaron las puertas al impulso de llegó á la cárcel real donde encontró
sus repetidos golpes. Entonces vieron al pronto la salvacion de su vida.
que ya iban á salir por ellas el Justicia Las heridas, los ultrages recibidos,
mayor con el marqués y sus criados le produjeron una terrible calentura,
como lo solicitaban. Requirió el Jus y aquel poderoso magnate, el comisa
ticia que le ayudasen cuantos alli se rio del rey Felipe II espiró en una cár
hallaban, ofreciéronle su asistencia los cel pública, no tanto de la gravedad de
caballeros. Salió con el marqués y los las heridas cuanto por el despecho de
tres criados suyos, el Justicia y sus verse tratado de una manera tan in
lugartenientes, y rodeáronle los ca digna. -

balleros, mientras la gente gritaba: Mientras ardia el pueblo de Zara


Viva la libertad y muera el marqués goza en el mas efervescente tumulto,
de Almenara! y tales atentados se cometian contra
Derramáronse otros por las diver el marqués de Almenara, permanecia
sas habitaciones del palacio invadido, la Aljafería cercada por grupos amena
y arrojaban por las ventanas con la zadores, reuniéndose alli mas de tres
mayor ferocidad cuanto encontraban. mil personas pidiendo á voz en grito
Hubo miserable que hizo trizas riquí que los presos fueran restituidos á la
23
478 CAUSAS CELEBRES.
-2

cárcel de la Manifestacion, y hacinan en este, que este negocio no parece que


do sin cesar combustibles para que si tiene otro remedio sino volverá Antonio
llegaba la noche sin haber logrado su Perez á la cárcel de los manifestados,
objeto fuese presa de las llamas el edi pues mañana y siempre que vuesas
ficio con cuantos dentro de él se en mercedes quisieren lo podrán volverá
contraban. la suya: que como sea entendiendo el
Los inquisidores en tanto no toma pueblo que no se les hace contrafue
ban resolucion definitiva ninguna, pro ro, como dicen los lugartenientes que
poniendo y desechando diversas me no se les hace, no habrá hombre que
didas, entre otras la de que los minis hable. Remítome á los señores condes
tros reales y el Justicia mayor saliesen de Morata y de Aranda. Dios guarde á
por las calles representando el incon vuesas mercedes. Hoy 24 de mayo
veniente grave que se ofrecia para el de 1591.—A. AnchIEPiscoPUs. —A los
tribunal de la Inquisicion en que cedie señores inquisidores apostólicos del
se en aquella prision, en la que no se reino de Aragon.»
habian violado los fueros; que no se
habia tratado de sacar de la Aljafería Gran divergencia habia entre los
á dicho Perez; que éste se hallaba sano inquisidores: don Juan de Mendoza se
y bueno preso por causas de fé, y que mostró desde luego propenso á ceder
el pueblo podia informarse del Justicia á las circunstancias; el doctor Morejon
de Aragon y de sus lugartenientes que tambien se inclinaba á este dictámen;
lo habian entregado y revocado la ma pero el inquisidor Molina de Medrano
nifestacion. opinaba por la resistencia, manifes
Estando en esto conferenciando, y tando que valia mas sepultarse entre
sin querer ceder ni á las instancias del las ruinas del palacio, que ceder á lo
virey, ni á las de los condes de Aranda que pedia el pueblo amotinado.
y de Morata, pues pasaban estos dos Por último, estando en estas con
últimos por partidarios de Antonio Pe ferencias y sin acabar de decidirse por
rez, se recibió un billete que remitia nada, se presentó delante de la In
el arzobispo por medio de un canónigo quisicion don Juan de Paternoy ha
llamado el doctor Monreal, y que ciendo grandes instancias por entrar;
decia: y aun cuando las turbas no querian de
jarle pasar, y le maltrataban, hizo en
«La casa del marqués de Almenara tender á los alborotadores y á los de
están combatiendo, y no veo otro re adentro que importaba que le oyesen
medio para que no peligre su persona los inquisidores. Mandaron éstos abrir
sino que vuesas mercedes vuelvan á An le, y entró con un tercer billete del ar
tonio Perez á la cárcel de los manifes zobispo, el cual por lo lacónicamente
tados, pues en entendiendo el pueblo que se hallaba concebido revelaba el
lo que es, se podrá tornar, á cobrar. peligro en que se hallaban todos si
Hoy 24 de mayo de 1591.—A. AtchIE en breve no devolvian á Antonio Perez
piscorus.—A los inquisidores. á la cárcel de los manifestados. Decia
»El doctor Monreal dirá de palabra asi este billete:
lo que yo no digo aqui.»
«El volber Antonio Perez es tanta
Al poco rato mientras se hallaban fuerza como se ve. Sin mas dilacion
deliberando azorados, con las alar vuesas mercedes le vuelban con segu
mantes noticias que á cada instante ridad, y entre en la cárcel de los ma
se recibian, llegó otro mensagero con nifestados. A. ARcHIEPIscoPUS CESARAU
GUSTANUS.))
un segundo billete del arzobispo, en
que decia:
¿? hizo presente de palabra
«Por si el doctor Monreal no ha da ademas el furor en que se hallaba el
do á vuesas mercedes otro que tengo pueblo, ¿ preparativos de incendio
escrito, el cual holgara harto que hu que se iban haciendo para la noche;
biera llegado á vuesas mercedes y contando ademas las circunstancias
oido á Monreal, torno á representar de la prision del marqués, el riesgo que
ANTONIO PEREZ. 479
-
-

habia corrido su vida en el tránsito, de Aranda y de Morata, con objeto de


y los desacatos de que habia sido sosegar el ito que habia en Zara
objeto. goza, habia adoptado el medio de que
El marqués habia logrado hacer lle el arresto que tenian Antonio Perez y
gar antes un billete, el cual era el que Francisco Mayorini en la carcel del
habia hecho que hasta entonces se hu Santo Oficio, se trasladase con penas
biese sostenido firme y decidido en su censuras á la de los manifestados.
resistencia el doctor Molina. ictaron, pues, el acuerdo en los tér
Insertamos á la letra este billete, minos siguientes:
que revela el carácter firme de aquel
hombre, á quien su entereza y valor «ACUERDo: Los inquisidores, habi
hacian digno de mejor suerte. do su acuerdo en conformidad, se re
Dice asi: solvieron en que pues no habia otro
remedio para moderar el furor del pue
«Héme holgado mas que sabria de blo, movido é suscitado por algunos
cir de que los presos estén allá, y tras caballeros que continuaban en inquie
esto no puede suceder nada mal. Aqui tarle apellidando libertad, y que ha
me han cercado harto número de gen ciendo tardanza en el proveer se si
te: hánme combatido la casa un buen guirian los inconvenientes referidos, y
rato. Llegó el Justicia, y halos hecho que en la Aljafería no habia fuerza pa
parar, aunque no irse, porque preten ra resistir la fuerza del pueblo, que á
den llebar presos á mis criados por la puerta de campo de ella amenazaban
algunos que han descalabrado. De lo de querer romper las puertas y venta
que sucediese, llegarán por allá las nas para sacar á dichos presos, se re
nuevas. Y por si les hubieren hecho la solvian en proveer que los dichos An
demanda con que aqui me han veni tonio Perez y Joan Francisco Mayorini
do, de que se restituya á Antonio Pe tuviesen por cárcel la de los manifes
rez á la cárcel de los manifestados, tados á nombre de este Santo Oficio
hago esta para suplicar á vuesas mer con penas y censuras, y de que se en
cedes que antes muramos todos que tregasen las personas de dichos presos
tal se haga. » á los dichos virey y Zalmedina para
que los llevasen á la dicha cárcel de
Al ver los inquisidores el estado en los manifestados, y se los conservase
que se hallaban las cosas, al saber de á los dichos presos en la dicha cárcel
una manera positiva que se iban ha y no la quebrantasen, so pena de ex
cinando fajos de sarmientos y cargas comunion mayor, y de seis mil duca
de leña, y que el pueblo tenia prepa dos para gastos del Santo Oficio.»
rado alquitran para dar fuego al edifi
cio, cedieron á las instancias del vi Las cinco de la tarde serian cuan
rey que manifestó que no saldria de do se les intimó y notificó á Antonio
otra manera de la Aljafería, sino con Perez y á Francisco Mayorini lo que
Antonio Perez y Mayorini, porque le habian determinado los inquisidores,
habian amenazado de muerte al entrar y se entregaron sus personas al virey,
si no se los llevaba consigo. Ofre á los condes de Aranda y de Morata, y
ciéndose á llevarlos con su persona se
á don Juan de Paternoy, que se habian
guros hasta la dicha cárcel de la Ma ofrecido á acompañarles. -

nifestacion, dejándolos alli en buena Apenas se presentó Antonio Perez


custodia, la Inquisicion, se doblegó á la en el umbral de la Aljafería, acompa
fuerza de las circunstancias, pero que ñado del virey y de los condes, cuando
riendo todavía dar á entender que ha— un grito unánime, espontáneo, inmen
cia de su propia autoridad lo que iba áso, acogió su presencia. Difícil le fué
ejecutar por miedo y obligada de la al virey y á los condes el hacerse paso
fuerza, envió por conducto de su se hasta el coche que le tenian preparado
cretario Juan de Borao, al Justicia de para conducirle á la cárcel de la Mani
Aragon y sus lugartenientes un recado festacion: un alborozo contínuo los fué
manifestando que por mediacion del aclamando por todo el camino, con en
virey, del arzobispo y de los condes tusiastas vivas á la libertad, obligando
uso CAUSAS CELEBRES.

repetidas veces al mismo virey á que montaña, y se llenó la ciudad de labra"


gritase tambien viva la libertad! dores y gentes decididas á estorbarlo
Cogíanle las manos á Antonio Pe á toda costa. Denunciaron y acusaron
rez, apretábanselas con el mayor cari á dos lugartenientes del Justicia, a Cha
ño, y cuando llegaron á la cárcel de la lez y Torralba, como amigos del mar—
Manifestacion, todos á voz en grito pi qués de Almenara y de haber faltado á
dieron que se asomase al balcon prin su obligacion.
cipal. El tribunal de los Judicantes, que
Entonces Antonio Perez, quitándo era un tribunal compuesto de diez y
se la gorra con que llevaba cubierta la seis jurados, jueces legos, y que en
cabeza, y colocando la mano en el pe tendia en esta clase de denuncias, con
cho, saludó repetida y afectuosamente denó á los dos lugartenientes á la pri
á los grupos que con tan ciego frenesí vacion de oficio y á destierro del reino,
le aclamaban. los cuales se marcharon á Madrid fugi
Despues, y por via de desahogo, tivos, como otras muchas gentes que
entraron los sediciosos en la casa que habian tomado parte por la Inquisicion.
habia enfrente de la Manifestacion, y La gente del pueblo rondaba por la
donde estaban el capitan y los solda noche las cárceles, y cuando veia al
dos que habian, como antes hemos di ¿ dependiente âd Santo Oficio, le
cho, puesto para observarle y evitar ispersaban á arcabuzazos, ocasionan
su fuga, y los ahuyentaron, saqueando do algunas desgracias. Dedicáronse
destruyendo completamente cuanto otros hombres de letras y de instruc
abia en ella. cion á buscar en los archivos las escri
Entonces se apaciguó, y no antes, turas por las que se habia introducido
el tumulto de los que habian permane en Aragon el tribunal de la Inquisi
cido todo el dia agitados hasta sacar á cion, para comprobar que habia fene—
Perez de las cárceles de la Inquisicion. cido el plazo por el que habia sido ad
No se hallaban, sin embargo, tranqui mitido en aquel reino.
los todavía, y asi exigieron que todos Llevaron sus ideas hasta el proyec
los dias se habia de asomar tres ve to de hacer que cesase la Inquisicion
ces al balcon para estar ciertos de que en Aragon, y para esto trataron de
no se habian vuelto á quebrantar sus mandar una embajada á Roma, nom
fueros. brando por embajadores á don Pedro
Ufanos y contentos se hallaban con de Bolea, uno de los promovedores del
la victoria conseguida los amigos de alboroto y grande partidario de Anto
Antonio Perez; veian en ella el triunfo nio Perez, y á un letrado llamado Mar
de los fueros de Aragon, y los señores co de la Serna; empero este proyecto
y títulos que habian tomado parte en no llegó á llevarse á efecto, porque co
el movimiento popular, hasta el núme nocieron que no serian admitidos en
ro de diez y siete, se confederaron y Roma, y que toda su fuerza estribaba
formaron una especie de compromiso en residir dentro de Aragon.
para auxiliarse en todo trance, porque La diputacion permanente encar
preveian la venganza del rey. Los cau gada de la defensa de la constitucion
dillos de las turbas populares eran Gil aragonesa, se dirigió al rey en una es
de Mesa, Gil Gonzalez y Gaspar de posicion, manifestándole que no podia
Burces. Era el primero el amigo que responder de los acontecimientos que
habia acompañado á Perez, valiente habian ocurrido, y para mayor seguri
oficial de los tercios flamencos; el se dad nombró una junta compuesta de
¿ un estudiante osado, bullicioso, cuatro jurisconsultos que decidiesen si
e gran crédito en las masas, y el ter la entrega de los presos de la Manifes
cero un zapatero sin trabajo, pero atre tacion habia sido ó no contraria á los
vido, y uno de esos elementos que fueros del pais.
abortan las revoluciones, y que las El dictámen de esta junta fué con
manchan con sus escesos. -
trario á la Inquisicion, manifestando
Para evitar que se volviese á tratar que habia habido contrafuero en la en
de trasladar los presos á la Aljafería, trega de los reos á aquel tribunal, es
llamaron á Zaragoza á las gentes de la poniendo que su entrega anulaba los
ANTONIO PEREZ. 181
=Aerº

privilegios de la Manifestacion, relati yor claridad de suerte que nadie pu


vos á no poder sufrir tormento ni un diera dificultar en ella; pero que en
proceso. La opinion de estos cuatro ju todo rigor de ninguna manera se pue
risconsultos era un verdadero voto de de decir que se haya hecho contra fue
censura contra el Justicia mayor del ro señaladamente, pues dijeron que
reino y sus lugartenientes, pues que hacian aquella provision illis meliori
con su consentimiento habian sido sa bus viis et modis quibus de foro etc.
cados los manifestados de la cárcel. » Cuanto á la tercera duda si enviam
Los inquisidores, el arzobispo, el do los señores inquisidores segundas
virey, el gobernador y el Justicia, no se letras para dar salida á la segunda
conformaron con este parecer; tachá manifestacion, que despues de haber
ronle de irreflexivo, precipitado, y te vuelto á Antonio Perez y Francisco
niendo por corto el número de los cua Mayorin á la cárcel se hizo, en que di
tro jurisconsultos para resolver cues gan que se los restituyan no obstante
tion de tanta importancia, en la que se la manifestacion y no digan dichas pa
atravesaban los derechos del tribunal labras que se revoque y annulle la ma
del Santo Oficio y los fueros del reino nifestacion, si con esto, se les podrá
de Aragon, se nombraron otros nueve entregar; decimos que se les deben
letrados para la decision definitiva del entregar; y W. SS. deben asistir á esto
asunto. Estos dieron el siguiente dic para que tenga efecto, y que en hace
támen: llo asi cumplen con su juramento y
«Cuanto á la primera duda de los se sentencia de excomunion, con la
ñores diputados si las letras de los seño obligacion que tienen de la observan
res inquisidores estaban bien conce cia de leyes y fueros de este reyno, sin
didas ó no, respondemos los abajo fir que sea necesario revocar las primeras
mados que aunque dichas letras en letras ni decir en las segundas revo
lo sustancial estaban bien, porque di cando las primeras.
cen prenden á Antonio Perez d á Juan » Cuanto á la última duda si han de
Francisco Mayorin por cosas de la fée, hacer diligencias los señores diputados
lo cual basta para que los jueces de la para que Antonio Perez no pueda ser
Manifestacion tengan obligacion de en sacado del reino, se responde que al
tregarlos conforme á las ¿. Virey ni al Gobernador ni á ninguno
nes de la córte del Justicia de Aragon, de los jueces seglares ni eclesiásticos
que otras veces en casos semejantes se le pide ni se le puede pedir con
se han ofrescido; pero que en cuanto forme al fuero, ni conforme al derecho
decian los inquisidores en dichas le seguridad ninguna para que no den
tras que revocasen y annullasen la Ma tormento ni saquen del reino ni hagan
nifestacion, no estaban bien; porque otro contrafuero, sino solo el juramen
aunque se les entrega al preso mani to que prestan al principio de sus ofi
festado, no por eso se estingue la ma cios de guardar las leyes con que han
nifestacion, sino solamente se suspen de juzgar, y el tener recurso á sus
de, de manera que si al preso no lo superiores. Y asi nos parece que no se
relajan hanlo de volver á restituir los puede hacer diligencia ninguna de
señores inquisidores al Justicia de presente, y que el remedio que hay es
Aragon debajo de la mesma manifes— que porque no está extinta la mani
tacion, lo cual es conforme á doc festacion, como está dicho arriba, fc
trinas del derecho y plática de este necida la causa y no habiendo relaja
Tell 0. -
cion, la córte del Justicia de Aragon
y Cuanto á la segunda duda en que terná jurisdicion para repetirlo de los
se dice si los señores lugarestenientes señores inquisidores.—Micer Pero Luis
debieron conforme á dichas letras, en Martinez. — Micer La Serna. — Micer
tregar las dichas personas de Antonio Bartolomé Lopez.—Micer Morlanes.—
Perez y Francisco Mayorin á dichos se Micer Miravete de Blancas. — Micer
ñores inquisidores de la manera que García.—Micer Diez.—Micer Aniñon.
las entregaron, respondemos que aun —Micer Hierónimo Lopez. — Micer
que la sentencia de dichos lugareste Agustin Morlanes.— Micer Agustin San
nientes pudiera estar dictada con ma ta Cruz.—Micer Felipe Gazo.»
482 CAUSAS CELEBRES,
-E=

El fallo de estos, pues, fué favora paresce que no hazemos en esto bien
ble á las prerogativas de la Inquisicion, supuesto que hay que mandar proveer
opinando que si los inquisidores vol contra los Lugar-Tenientes del Justi
vian á pedir los presos el Justicia de cia de Aragon para que le remita, por
beria suspender los efectos de la ma sin dubda creemos habrá motin
nifestacion mientras el tribunal de la el pueblo y muy formal porque ansi
Fé seguia la causa. lo han prevenido y publicado, porque
. Entretanto el rey, cuya prudencia los que le ayudan en estas cosas y to
disimulo en las grandes ocasiones do el pueblo, y todos los estados pa
an tenido motivo de conocer nuestros resce que los tiene hechizados.»
lectores, no tomó por el pronto provi- Estas cartas son de fecha de 11 y
dencia alguna. Escribió á las ciudades 16 de junio, y el 17 el Consejo de la
de Aragon que nunca habia sido su Suprema Inquisicion contestó á los in
ánimo el que se quebrantaran los fue- quisidores de Zaragoza advirtiéndoles
ros de aquel pais, sino castigar á los que suspendiesen el procedimiento de
que habian delinquido contra la fé y volver á Perez á las cárceles del San
la religion á que consagraba todo el to Oficio, vistas las dificultades que se
celo y todo el cuidado de sus armas. ofrecian; pero que pasasen á publicar
Los inquisidores habian escrito al rey el edicto de San Pio V, en el que se
y dádole parte de los sucesos el mismo imponen penas á los que impiden el
dia siguiente 25 de mayo. ejercicio de la Inquisicion. Asi se
El Consejo Supremo de la Inquisi-hizo. -

cion mandó á los inquisidores que re- En este edicto, despues de decir
clamasen las personas de los reos; pero que la Inquisicion de Zaragoza habia
amedrentados los inquisidores no se sido funda la por los reyes Católicos
atrevian á obrar como se les mandaba. por inspiracion del Espiritu Santo, se
El mismo don Alfonso Molina de Medra- insertaba una bula de San Pio V en la
no, ese severo é inexorable inquisidor, que se imponen graves penas á los que
escribió repetidas veces al Consejo de la maltraten de obra ó palabra á los mi
Suprema para que le permitiese mar—nistros del Santo Oficio, ó embaracen
charse de alli porque su vida estaba sus funciones, ó tomen sus presos, ó
en contínuo peligro. En una de sus es den favor, ayuda ó consejo para ello.
osiciones decia que todo el público, y Referian luego lo que habia pasado en
¿ los clérigos, frailes y monjas es la prision ó captura de Antonio Perez y
taban movidos y andaban siempre en de Juan Francisco Mayorini, conclu
ayuntamientos, donde no se trataba yendo con estas palabras: «á instancia
mas que de esponerse á cualquier pe y peticion del fiscal concedemos las
ligro en defensa de la libertad, asegu presentes por las cuales á todos los
rando que antes de permitir se sacase sol redichos y á cada uno y cualquiera
á Perez del reino perderian la vida, no de vos lo sobredicho intimando y no
consintiendo de ninguna manera que tificando decimos, amonestamos, re
le trajesen preso. querimos y mandamos só las censuras
En otra carta decia que «si se queria y penas contenidas en la dicha consti
que tratasen de sacar á Antonio Perez tucion de Pio Papa V, para que asi en
de estos reinos con nombre y autori el negocio arriba referido, como en to
dad del Santo Oficio, se podia mandar dos los de aqui en adelante se ofre
á los familiares y á los ministros de cieren, tocantes al dicho Santo Oficio,
éste que tomasen otro modo de vivir, oficiales y ministros de él, asistais y
sin quedarles esperanza á poderla deis y presteis todos el consejo, favor
ejercitar por ningun camino, segun el y ayuda que fuere necesario, con el
estado en que el pueblo se hallaba. celo, cuidado y fidelidad que reino tan
Conforme á esta mala disposicion de fiel, católico y cristiano como este ha
los ánimos y á las sospechas que les siempre mostrado al servicio de Dios y
tienen irritados de que en volviendo á aumento de su santa fé católica y á la
la Aljafería á Antonio Perez se le dará conservacion del libre y recto uso del
muerte, ó se le llevará á Castilla, con ejercicio de este Santo Oficio, por cu
tra los fueros y la libertad del reino, yo medio con el favor divino se ha li
ANTONiO PEREZ. 133
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brado y defendido de los errores y ca que por los objetos á que se referian
lamidades que padecen los del Bearne eran sumamente peligrosas, haciéndo
y Francia estando tan vecinos.» se notable el siguiente romance com
Al mismo tiempo en Madrid forma puesto por Antonio Perez.
ba el rev por un decreto fecha 3 de
agosto dado en el Escorial, una nueva Agora vuelvo á templaros,
junta para tratar de las cosas de Ara Desacordado instrumento
gon, la cual habia de celebrar sus reu Que de una vez no se acaban
niones en casa del cardenal arzobispo Las muchas quejas que tengo.
de Toledo.
Aunque ya de suerte estais
Componíase esta junta del mismo Descuaderñado y abierto,
cardenal de Toledo, con dos miembros Que no hay cosa que os parezca,
del consejo de la Inquisicion los que á Si yo solo no os parezco.
él le pareciesen, de Campi y Quintana, Contemos nuevas historias
de Rodrigo Vazquez, el famoso juez de De aquellos pesares viejos,
la causa de Antonio Perez, y de fray Aunque si han de ser pesares,
Diego de Chaves, el confesor del rey, Mejor será que lloremos.
á quienes hemos visto intervenir en
todos estos asuntos de una manera tan Ayuden cuerdas tan locas
A un loco de penas cuerdo,
activa como poco ilustrada. Felipe II, Y el que niegue que lo soy,
que era un hombre tan minucioso en Pruebe á sufrir un destierro,
los detalles, fijó en el mismo decreto
hasta el modo como habian de sentarse Verá que mayor cordura
los vocales de esta junta; dejando la No cabe en humano pecho,
eleccion del secretario al juicio del car Que á tantos años de agravios
Enseñar el sufrimiento.
denal, si bien recomendando en el
mismo decreto que fuese el fiscal del Desengáñase la causa
consejo de la Inquisicion. De las ¿ que padezco,
Al mismo tiempo en Madrid se to Que haberme humillado tanto
maban multitud de declaraciones so Asegura mi remedio.
bre los acontecimientos del 24 de ma Que un alto ciprés es justo
yo á los que habian sido desterrados Que tema el rayo del cielo,
de Aragon y á los que por miedo ha Pero no la humilde caña
bian huido de Zaragoza. El rey desde Que sabe humillarse al viento.
el Escorial habia escrito al vire y de
¡Oh Babilonia del mundo!
Aragon, al gobernador, al Justicia, á Bien haya el triste suceso,
los diputados del reino, á los jurados Pues me trajo á contemplarte
de Zaragoza, al conde de Morata, á don Con lágrimas desde lejos.
Jorge de Herrera y varios señores y Santísimas soledades,
títulos de la ciudad, apelando á su fi Yo os adoro y reverencio,
delidad y tratando de que hiciesen sa Pues miro desde vosotras
lir á la gente de la montaña que habia Las desventuras que dejo
venido á incorporarse y sostener á los
que defendian los fueros. Qué se ven desde estos montes
Entretanto Antonio Perez, á quien De mentiras y de enredos,
todos los dias se hacia presentar en En esas calles pobladas
De animales y hombres ciegos.
las ventanas y saludar al pueblo, no
omitia medios de sostener el espíritu Qué se ven de honradas almas
público. Presentó una esposicion á la Envueltas en cuerpos muertos,
Que sin duda es muerte viva
diputacion manifestando que su causa La de los pobres discretos.
era la causa de las leyes del pais, y
que entregada su persona, los fueros Qué de opiniones injustas
venian á caer por tierra. Todos los En muchos ricos y necios
dias aparecian pasquines en las calles Que canonizan su gusto
y en las misma puertas de la Inquisi Con los que tienen sujetos.
cion; cantábanse canciones subversi Qué de Vellidos traidores
vas, imprimíanse sátiras y canciones Con máscaras de consejos,
184 CAUSAS CELEBltES.

Y qué de Alejandros Magnos ¡Oh Babilonia formada


Sin virtud y sin provecho. De lenguajes tan diversos,
Madrastra á los hijos propios
Qué de varas que han torcido Y madre á los estrangeros
Amor, interés y miedo,
Por ser ellas tan delgadas Varias naciones del mundo
Y asir de la punta el peso. Llevaban á Roma un tiempo
Lo que de tí llevan hoy
Que de Ulises y sirenas, Los mas enemigos reinos.
Y qué de caballos griegos, Mucha licencia tomamos;
Que estando dentro de casa Parad, señor instrumento,
Paren los hijos agenos. No os acaben de quebrar
En la cabeza del dueño.
Que de inútiles que sirven
A la sombra de los buenos, Dejemos para otro dia
Que los gastan poco á poco, Lo que ha muchos que sabemos,
Como las yedras al fresno. Y qüeden agravios propios
Sepultados en silencio.
Qué de hipócritas que roban
Honras, famas y dineros,
Con unos ojos hundidos Incalculable fué el efecto que causó
De pensar malos intentos. en el pueblo este romance; á nosotros
nos parece hoy frio, y sin embargo,
Qué de engaños que han medido comprendia el pueblo tan bien la sáti
Con las varas de sus dueños; ra y las alusiones, y las aplicaba de tal
Qué de señores con deudas, manera á determinadas personas y á
Y de señoras ron deudos.
ciertos acontecimientos, que el virey se
Qué de haciendas razonables, vió precisado para combatir su perni
Que de dones de otro tiempo ciosa influencia, á hacer que el Padre
Resueltos en pasananos Murillo compusiese otro romance en
De una basquíña ó manteo. contestacion; pero sucedió lo que en to
Qué de Lucrecias romanas, das las ocasiones en que están exacer
Humilladas por el peso badas las pasiones, que todo el mundo
De este metal invencible, leyó el ataque, y pocos ó ninguno hi
Dorador de tantos yerros. cieron caso de la defensa.
El estado de Zaragoza era el de una
Qué de escuadras de perdidos, contínua agitacion. Grandes grupos re
Cuyas paredes y cuerpos
Cubren la seda y el oro, corrian contínuamente las calles, y
Comprados por tantos precios. cuando encontraban á algunos de los
agentes ó esbirros de la Inquisicion,
Qué inútil banda y escuela los cazaban á tiros. Una noche hacien
De idolatrados mozuelos, do los jurados de la ciudad su ron
Llenos de nuevas de Flandes,
Y siempre de Flandes lejos. da, les dispararon varios arcabuzazos,
de cuyas resultas salieron algunos he
Qué de cobardes espadas ridos, y el gobernador tuvo que reti
En fé de mostachos negros, rarse sin haber podido conseguir es—
Y qué de plumas valdías, traer de casa de don Diego de fieredia
Harto mejor para remos.
los amotinados que en ella se habian
Qué de malquistos por graves, refugiado.
Que todo su pensamiento De dia en dia se aumentaba la efer
Es llevar una merced vescencia. El anciano Justicia, antes
Por infinitos rodeos.
tan querido y festejado de todos, no
Qué de lindos á sus ojos podia salir ya á la calle sin verse in
Que en otros, parecen feos, sultado y denostado de todos, porque
Porque son lisonjas mudas habia perdido su prestigio desde que
Las lunas de los espejos. accedió á la entrega de Antonio Perez.
Las paredes de calles y plazas se
Qué de privanzas que esta ban
Compitiendo con los cielos, veian cubiertas de pasquines diaria
Se ven humillar agora mente, pasquines que escribian Anto
Mas bajas que los infiernos. nio Perez, el maestro Basante, gramá
ANTONIO PEREZ. 185

tico, y un estudiante llamado Enharco, Todos estos, para espiar las faltas
y las gentes se arrebataban de las ma que habian cometido, debian marchar
nos los dictámenes de los letrados que á servir en las tropas del rey á los Pai
se publicaban favorables á su causa. ses Bajos: arreglo inícuo é infame, en
Llegaba á tanto el entusiasmo, que que eran sacrificados los hombres del
una infeliz frutera que vendia fruta pueblo para salvar la cabeza de los no
debajo de las ventanas de Antonio bles, cuando las escitaciones y el ejem
Perez, y que le proveia de postres to plo de estos eran los que habian pro
dos los dias, porque el orgulloso mi movido hasta entonces el movimiento;
nistro no tenia mas fortuna que la li y Antonio Perez desde su cárcel era el
mosna pública, debajo de un platito en que habia manejado los hilos de tan
ue le mandaba unas guindas, colocó complicada trama.
isimuladamente diez reales, que al Apenas llega á su noticia tan pérfi
encontrarlos Antonio Perez, no pudo da resolucion, cuando llama al señor
menos de conmoverse al ver la adhe de Bárboles, al de Biescas, y á otros de
sion de aquella infeliz, que asi se pri los títulos que entraban en aquella con
vaba de aquello que era acaso el único ciliacion, y les hace ver el peligro en
recurso para sus hijos. que se hallaban, y el riesgo á que se
La señoras de mas alta situacion le esponian separando su causa de la cau
llevaban regalos de viandas, le surtian sa de los fueros y de la libertad de su
de ropas; y hasta las monjas mismas pais, porque el rey jamás los llegaria á
se esmeraban en hacerle presente su perdonar.
consideracion y afecto. Enteró á Gil de Mesa de cuanto
Los barones de Bárboles, de Bies pasaba. Heredia y don Martin de Lanu
cas y de Purroy, le visitaban casi to za deshicieron los planes que fragua
dos los dias; y á medida que el rey iba ba el duque de Villahermosa, y la irri
ganando terreno en una parte de la tacion contra la alta nobleza creció de
aristocracia, el pueblo se mostraba ca dia en dia, en términos de que en la
da vez mas fanatizado por la causa de noche del 27 de agosto fué públicamen
Antonio Perez. Paseaba contínuamente te atropellado é insultado el conde de
¿ el frente de la cárcel de la Mani Morata.
estacion, con objeto de verle á la ven Los títulos de Zaragoza, como los
tana y saludarle: presentábase en ella condes de , Belchite, de Sástago, de
Antonio Perez, y entonces el entusias Aranda y de Morata, y algunos caba
mo no tenia límites. lleros principales, los que con su auto
Agolpábase mucha gente del campo ridad no habian podido calmar al pue
y de la montaña dentro de la ciudad: blo, eran el objeto del odio de este.
la impunidad les habia dado grande Algunos vivían fuera de la ciudad; y
aliento é insolencia, si bien las gentes solo los amigos de Antonio Perez eran
de los títulos, arrepentidas del punto los que hacian de cabeza en el pueblo,
á que habian llegado las cosas, trata y los que tenian toda la autoridad.
ron por medio del virey de ponerse Don Fernando de Aragon, duque de
bien con la córte, arreglando para esto Villahermosa, que vivia en la villa de
un proyecto de conciliacion con ella, y Pedrola, en cuanto supo el alboroto es
pensando en enviar comisionados al cribió al rey doliéndose del caso, y su
rey para aplacar su enojo, y separar plicando le mandase lo que fuere de SUl
su causa de la del pueblo. su servicio. El rey le contestó agrade
Para es o propusieron la entrega de ciéndole aquellos sentimientos, man—
Gil de Mesa, de Gil Gonzalez y de Gas dándole que con su familia pasase á
par de Burces, es decir, de los gefes ¿ procurase aplacar el ánimo
de los sediciosos.
del partido popular, obteniendo en
cambio el perdon de don Diego Fer— Obedeció el duque cuanto se le
nandez de Heredia, don Martin de La mandaba desde la córte, y desde alli
nuza, y Manuel don Lope, en cuya ca daba aviso de cuanto pasaba, no to—
sa se fraguaban todos los planes, tan mando el vire y ninguna resolucion si
to que la llamaba el pueblo la casa de no con el parecer de sus consejeros y
la libertad, y de don Pedro de Bolea. de los señores de título y de los caba
*
186 CAUSAS CELEBRES.

lleros principales del reino, á quienes el que se les tratase de tibios en el ser
mandó que º por de pronto la vicio del rey. -

gente arinada de que pudieran dispo Acusábaseles de que obraban con


ner para poder verificar la traslacion de oca actividad y energía para aplacar
Antonio Perez á la cárcel de la Inqui os ánimos de los sediciosos, cuando es
sicion, procurando en tanto por cuan to era efecto de la timidez que les ins
tos medios les era posible persuadir al piraba el pueblo furioso, y no falta de
pueblo de que todo se hacia sin per fidelidad al rey y de buenos deseos de
juicio de los fueros. la ¿ tranquilidad del reino. Asi es
En vano empleaban todo género de que todos ellos se presentaron al virey,
recursos y de razones los caballeros y de palabra le espusieron sus senti
para procurar persuadir á los labrado mientos, y el duque de Villahermosa,
res; estos estaban ciegos, entusiasma el conde de Aranda y otros varios le
dos por Antonio Perez: asi es que les dirigieron la notable carta siguiente:
respondian descomedidamente, y aun
uno de ellos se atrevió á decirles que Habiendo precedido algunas juntas
daria sarmientos para quemar al que con W. S. I. y declaracion de los dipu
se atreviese á quebrantar los fueros y tados del Reyno, con consejo de sus
libertades del reino. letrados, de que en entregar la perso
Habíase concertado que la entrega na de Perez al Santo Oficio no se hacia
y traslacion de los presos se verificaria contrafuero, y teniendo en Zaragoza
el 20 de agosto, punto tratado en una para este fin el número de arcabuce
junta en casa del virey; pero al llegar ros que nos mandó apercibir y muchos
á la ejecucion de esto, al ver la altera mas, en la última junta que se tuvo el
cion de la gente, no se atrevió el go 12 de agosto, en presencia del señor
bernador don Ramon Cerdan, capi Gobernador yº la Real Audiencia,
tan veterano de las guerras de Flan nos propuso V. S. I. que si nos pares
des, y hechura del marqués de Alme cia que con nuevas letras del Santo
nara, á verificarlo, fundado en que Oficio pidiesse á Antonio Perez, asis
no habia recibido avisos competentes tiendo con nuestras personas hasta de
de Madrid. Propuso á la misma junta jarlo en la cárcel de la Inquisicion,
el gobernador las dificultades que se advirtiéndonos que todo esto lo pro
le ofrecian, é hicieron tal impresion ponia W. S. I. de suyo y sin tener ór
en el ánimo de los títulos y caballe den de S. M. El primero que votó fué
ros, que fueron de parecer de sus el señor Gobernador representando
penderlo hasta recibir respuesta de la muchos inconvenientes de que se de
córte. bia presumir que la restitucion del
Despidióse entonces la gente arma preso no podia ser, sin algun escánda
da que habian hecho entrar cada uno lo, Rºº á todos nos paresció que pues
de los caballeros y títulos, y la inso S. M. no estaba advertido dello, ni
lencia y el orgullo de los alborotadores V. S. I. habia hecho con su órden la
creció, pareciéndoles que el Justicia junta, seria bien darle aviso y no aven
mismo les temia, y aunque no negaban turar por solos nuestros pareceres su
la obediencia al rey, hacian poco caso auctoridad, pero que si S. M. sin em
de su autoridad y fuerza en las cosas bargo de lo dicho lo mandava ejecutar,
pertenecientes á Antonio Perez. nos cerraríamos los ojos á los peligros
Cuando en Madrid se supo esta de y hasta morir dariamos favor á sus mi
mora, y la causa de la suspension que nistros; y como este ofrescimiento fué
se atribuia á no haber habido contés sencillo y con desseo de que se hicies
tacion á las consultas que hacian el vi se esperiencia del, avemos aguardado
rey y el gobernador, se mandó un pos respuesta de consulta, y considerando
ta con la órden de proceder inmedia que pueda ya aver venido de la carta
tamente á la entrega. y que desta suspension se siguen gra
Al mismo tiempo algunas espresio vísimos inconvenientes, nos ha pares
nes equívocas que contenian las órde cido reducir á la memoria de W. S. I.
nes de Madrid, ultrajaron á los seño todo lo que pasó aquel dia en la junta,
res aragoneses, que llevaron muy á mal y suplicarle tome resoluzion sobre lo
ANTONIO PEREZ. 4.87
3=

que en ella quedó indecisso, porque das. Habia logrado ya limar la reja de
no paresciendo suficiente medio aquel, su aposento con unas tijeras que ha
se passe á otros que hay dentro del bia convertido en lima, cuando fué
Reyno, y no crean los estrangeros que denunciado por un jesuita llamado el
faltan fuerzas para autorizar la justicia padre Escribá, á quien Antonio Perez
ó que nosotros con tibieza nos ofrece— se confiaba.
mos al servicio de S.M., pues no tie El dia 10 de setiembre el inquisi
ne vassallos que con tanta fidelidad lo dor Morejon mandó á toda priesa un
hagan; y porque desto conste, acorda recado al Justicia mayor que habia sa
mos darlo á V. S. I. firmado de nues lido de Zaragoza á un negocio perento
tras manos en Zaragoza, á 10 de se rio, avisándole de que volviese inme
tiembre de 1591. diatamente, porque sabia que Antonio
El Duque de Villahermosa.—El Con Perez trataba de huirse; que para ello
de de Aranda.—Conde de Ribagorza. tenia limada parte de la reja de su
—El Conde de Sástago.—El Conde de aposento con unas tijeras, y que éstas
Morata. -
las hallaria debajo de la cabecera de
su cama; que no habia querido dirigir
Al mismo tiempo enviaron al rey se á ninguno de sus lugartenientes,
para su conocimiento la siguiente es— sino que e hábia avisado a él directa
posicion: mente.
En efecto, el Justicia mayor mismo
SEÑOR: en persona se presentó en la estan
Porque los ministros de V. M. ten cia donde se hallaba preso Antonio Pe
gan entera satisfaccion de nuestros áni rez, y despues de reconocerlo todo
mos, y el vulgo salga de algunos enga bien no halló otra cosa sino dos peda
ños escandalosos en que está, avemos zos de cordon grueso como el dedo de
dado ante un Escribano de manda unas ocho varas, y un pedazo de cuer
miento del Virey el papel que él en da de cáñamo del mismo grueso como
viará á V. M., y porque nos ha dicho de otras cuatro varas. Llamó á un cerra
que la suspension del significamus jero llamado Gil Buitron para que re
procedia de no tener respuesta de conociese la reja y los hierros, la cual
V. M., acudimos á sus Reales pies y le se encontró limada en una de sus bar
suplicamos se sirva de tomar resolu ras casi toda sin acabarla de cortar,
zion en este caso, darnos el órden que faltándole solo como el canto de un
avemos de seguir, pues con tantas ve real, de modo que al empuje se acabó
ras desseamos emplearnos en el servi de romper.
cio de V. M. á quien guarde muchos Entonces el Justicia hizo trasladar
años nuestro Señor.—De Zaragoza á 10 á Antonio Perez á una de las piezas
de setiembre de 1591. -
del interrogatorio dejándole incomu
El Duque de Villahermosa.—El Con nicado para que nadie le pudiese ha
de de Aranda.—Conde de Ribagorza blar ni escribir, y con solo un mucha
—El Conde de Sástago.—El Conde de cho sobrino del llavero. Mandó tam
Moruta. bien prender á Arantegui, que era el
guarda que dormia en su aposento, y
Conocia Antonio Perez todos los colocó delante de la puerta de la es
obstáculos con , que tenia que lidiar: tancia en que nuevamente lo recluia
veia con dolor deslizarse una desunion una guardia con ocho arcabuceros, ca
entre la alta clase de la sociedad y el da cuatro en dos puertas que hay y los
pueblo, y temia no se realizase por se demas hasta treinta repartidos por la
unda vez su estradicion de las cárce cárcel en las partes que mas convenia.
es de los manifestados para ser lleva Mucho le dolió á Antonio Perez esta
do de nuevo á las de la Inquisicion: reclusion. Las gentes que estaban acos
comprendió que temprano ó tarde en tumbradas á verle todos los dias, al
la lucha terrible que habia emprendi ver que no parecia en la ventana se al
do contra el rey tendria que sucumbir borotaron, y muchos labradores y gen
y trató de fugarse á todo trance pro tes de la ciudad se llegaron á la puerta
porcionándose para ello limas y cuer de la cárcel diciendo, que si el Justi
188 CAUSAS CELEBRES,

cia decia que Antonio Perez habia lima tos preparativos, se puso furioso con
do la reja mentia, y que era un falso tra el virey, el gobernador, los títulos
testimonio que se le levantaba. y señores, designándolos como autores
En el consistorio se presentó don de una gran maldad.
Juan de Luna, el que con su arrebato y El 24 de setiembre debia ser un
pasion acostumbradas habia dicho que dia muy funesto para Aragon, y de in
aquella limadura de la reja que se calculables consecuencias para la suer
acumulaba á Antonio Perez se hallaba te de aquel reino.
hecha hacia doce años, que era la obra La noche del 23 se colocó un es
de un facineroso que habia estado alli cuadron de caballería y una compa
reso; que de esto habia pruebas; y ñía de infantería delante de la puerta
uego despues presentáronse testigos de la cárcel de la Manifestacion; pero
que dijeron que habian visto la reja aquella tropa ni tenia pólvora ni balas,
antes de prender, á Antonio Perez, y y se hallaba en muy mal sentido, por—
que el hierro se hallaba limado como que no queria ayudar á destruir los
entOn CeS. fueros y libertades del pais, pregun
El virey de Aragon recomendó el 11 tándose unos á otros por qué los habian
mismo de setiembre al Consejo Su llevado alli y contra quién se prepara
premo de la Inquisicion la persona de ban á pelear. A la mañana siguiente se
Antonio Morejon, inquisidor de Aragon, mandaron cerrar todas las puertas de
como habiendo prestado un gran ser la ciudad, y no pudiendo salir á traba
vicio por haber impedido que se fu— jar los labradores, gente intrépida y
gase Antonio Perez de la cárcel de los valiente, se fueron reuniendo en la
manifestados. plaza á la espectacion de un gran su
Los inquisidores, habiéndose pues ceso y resueltos á acudir con ánimo es
to de acuerdo con el Justicia mayor forzado en defensa de sus fueros y li
y sus lugartenientes, resolvieron se bertades. Ordenado que nadie saliese
verificase la entrega y traslacion de ni entrase por las puertas de la ciudad,
los presos desde la cárcel de la Mani los soldados que tenian el gobernador,
festacion á la de la Aljafería, el dia 24 los diputados y jurados, y la gente ar
de setiembre. Determinaron hacerlo mada que habian traido los condes y
con toda pompa, disponiendo una ver señores, ocuparon las calles y las pla
dadera escena teatral para imponer al zas por donde los presos habian de ser
ueblo, no contando con que aquella llevados solemnemente á la Inquisi
arsa iba á ser estrepitosa y sangrien cion.
tamente silbada. Todos estos preparativos estaban
Tres dias antes, agobiado por los tomados ya á las seis de la mañana.
años y quebrantado por grandes disgus Serian las nueve, cuando sin saberse
tos, falleció el Justicia mayor de Aragon por qué motivo, la gente que se halla
don Juan de Lanuza, entrando á suce ba dentro de la iglesia de la Seo acu—
derle en tan elevado cargo y en tan di dió con espadas hácia la parte de la
fíciles circunstancias, su hijo primogé plaza donde se hallaban los soldados,
nito, llamado tambien don Juan de La gritando: viva la libertad, y vamos
nuza, que debia ser el último que ocu— á la cárcel. Los canónigos procuraron
pase esta alta dignidad, protectora de cerrar las puertas y no lo pudieron lo—
las libertades de aquel reino, que de-grar por la mucha gente que habia, y
bian caer con su cabeza en el cadalso. que á grandes voces pedia quedasen
Preparóse y concertóse todo para abiertas.
verificar la traslacion de Antonio Pe El gobernador recorria las calles y
rez y Juan Francisco Mayorini á las plazas con una compañía de caballos
cárceles inquisitoriales. Algunos dias ligeros, con órden de matar al que gri
antes hízose entrar en la ciudad unos tase: viva la libertad! Un muchacho
cuantos arcabuceros para contener al que se hallaba á la ventana de una ca
pueblo, cuyo movimiento se temia, y sa dió este grito, é inmediatamente ca
se preparó al mismo tiempo gente ar yó atravesado por una descarga. Indig
mada. nóse la gente, y se declaró inmediata
El pueblo, que se apercibió de es mente el motin. -
ANTONIO PEREZ, 89

Presentáronse en la Seo don Diego ra proveer lo que fuese necesario de


de Heredia, don Juan de Torrella y terminar. Fueron con ellos los con
otros señores, hasta con ochenta laca des de Sástago, Aranda y Morata con
yos, en su mayor parte de Torrellas, y todos los señores y vasallos nobles y
entraron por la parte del claustro que las gentes mas principales del reino y
sale á la iglesia, acompañados de mu ciudad, con mas de seiscientos arcabu
chísima gente. Presentóse el canónigo ceros, y se dirigieron procesionalmente
Torrellas, intimando de parte del ca á la casa del virev.
bildo á la gente que saliese de la igle Salió la comitiva á pie por las ca
sia, lo que verificó, quedándose en el lles para la ejecucion de la traslacion,
claustro, pidiendo que estuviese abier con el fin de dar á entender al pueblo
ta la puerta del claustro, que ellos de que esta no era contraria á los fue
guardarian la iglesia. Asi se verificó, ros libertades de Aragon.
estándose alli hasta las once de la ma legado el virey y la comitiva á la
ñana. plaza del Mercado, donde se hallaba la
Al mismo tiempo algunos labrado cárcel de la Manifestacion subió el vi
res que se habian apoderado de la tor rey á una casa para ver este espec
re de San Pablo, dispararon el relój, táculo como si fuese una fiesta pública.
con lo que al oir el toque de rebato se Parecia en efecto una fiesta solemne:
reunió muchísima gente. A las diez, precedian á todos los maceros, dos del
por orden del Justicia, el tambor del Justicia de Aragon, dos de los diputa
reino tocó á retirarse, y los soldados dos y otros dos de los jurados con sus
de los diputados, que se hallaban en la mazas alzadas.
plaza de la Seo, se entraron en la di Llegaron á la cárcel llamada de la
putacion y mucha gente con ellos, pa Manifestacion, y entró en ella el lugar—
ra esperar lo que responderian los lu teniente Gerardo Clavería seguido de
gartenientes del Justicia á las cartas dos diputados y jurados de Zaragoza y
que les, envió la Inquisicion y les ha ¿ de los maceros con sus ma
bian sido presentadas, en las que les zas alzadas.
mandaban que en el término de terce El resto de la comitiva permaneció
ra hora se entregasen los presos al al en la calle aguardando. Hallándose den
guacil del Santo Oficio. tro de la cárcel y habiendo el lugarte
- A las once salió uno de los lugar niente entregado á Alonso Herrera y
tenientes para llevar la providencia Guzman, alguacil del Santo Oficio, los
de ser entregados los presos al algua ¿ Antonio Perez y Juan Francisco
cil de los inquisidores, habiendo dado ayorini, á quienes se pusieron dos pa
primero noticia otro lugarteniente de res de grillos, y á punto ya de bajar pa
esta determinacion al consistorio de los ra colocarlos en el coche donde habian
diputados y jurados. El secretario de de ir, Gil de Mesa, que habia estado
la Inquisicion, Lanceman de Sola, que viendo lo que pasaba desde la puerta
se hallaba presente, al anunciarle la de Toledo, juzgando que habia llegado
determinacion del tribunal del Justicia la hora de obrar, se presentó por la ca
mayor, requirió al lugarteniente pa lle Nueva, donde habia algunos lacayos
ra que fuese en persona á entregar los con gente de armas, penetró en el Mer
presos. - - cado seguido de mucha gente con es -
Manifestó éste hallarse dispuesto á padas desenvainadas y otros que arro
hacerlo, y entonces requirió á cuantos jaban piedras gritando libertad y ha
habia presentes para que le diesen fa lló alli mas de cuatrocientos hombres
vor, ayuda y le asistiesen con él. Ofre con el gobernador que estaban custo
cieron hacerlo y salió luego el lugar— diando el Mercado.
teniente Clavería acompañado del dean Les soldados dispararon algunos ti
Cutanda de Teruel y Miguel Turlan, ros, mas con el ánimo de intimidar que
diputados, con muchos ciudadanos, con el de ofender, porque inmediata
llevando delante sus insignias de ma mente tomaron la huida. Dispararon
zas y con soldados de guardia, que contra el gobernador los amotinados
dándose los demas lugartenientes, ju algunos arcabuzazos; pero solo hirieron
rados y diputados en su consistorio pa al caballo, y entonces se apeó y huyen
100 CAUSAS CELEBRES.
=

do con gran trabajo se refugió dentro oficiales del Justicia que sa


de una casa, amparándose en otra los liese, á fin de conjurar la tempestad y
diputados, jurados, condes y señores evitar la efusion de sangre que corria
al ver el gran peligro que corrian. por la ciudad, sereno en medio de aquel
Gil de Mesa y los que le seguian se peligro, se negaba á salir, y hasta el
apoderaron del Mercado, hirieron á va mismo lugarteniente, Micer Clavería,
rios guardias de á caballo y de á pie, que alli se hallaba, le instó á que lo ve
dejaron tendidos en el suelo á Juan rificase.
Palacio, archivero del rey, á Pedro Entonces Antonio Perez pidió un
Gerónimo Bardají, á Diego Vedal y auto que certificase que salia por órden
otros caballeros, saliendo otros heridos. del mismo lugarteniente; pero en aquel
Mataron las cuatro mulas del coche en momento no habia ni oficiales ni nota
que habian de ser llevados los presos rios que pudiesen certificar lo pe ¿
y lo hicieron pedazos. Cercaron la casa dia, y entretanto continuaba fuera la
en que se hallaba el virey, y el gober ritería del pueblo y los tiros de arca
mador, que al verse abandonado de la uz, que cubrian de pavor y sangre la
tropa tuvo que esconderse, y gritaba ciudad. Por último, Perez consintió en
el pueblo que queria poner fuego á la salir por un postigo de la cárcel, y se
casa, en términos que tuvieron que ir presentó á las turbas embriagadas ya
huyendo el virey y los diputados por completamente con su triunfo.
los tejados, porque llevaron á efecto su A punto estuvo de ser sofocado por
amenaza prendiéndola fuego y se que el entusiasmo popular, porque todos
mó toda, porque dió la casualidad de querian abrazarle y levantarle en hom
que en aquel instante se presentó alli bros. En aquel momento una sola pala
un muchacho con un haz de romero bra de Antonio Perez hubiera sido bas
encendido y con él la pegaron fuego, tante para que fuese aniquilada la In
suponiendo que dentro se hallaban aun uisicion de Aragon, y no hubiese que
el virey, los condes, y cuantos habian ¿ con vida ni uno solo de sus minis
intervenido en la traslacion de los tros y agentes. En seguida fué llevado
presos. entre aclamaciones y no sin peligro y
Muchos murieron al huir del incen esposicion de su vida, en casa de don
dio, mas el virey y la mayor parte de Diego de Heredia, donde descansó al
ellos se escaparon por los tejados y por gunos momentos, y respiró sin peligro,
otras casas rompiendo tabiques. Em porque tan terrible es la furia popular
rendieron contra dos diputados, dos como su entusiasmo. Mientras descan
jurados, el secretario y alguacil del saba, volvieron las turbas á sacar de
Santo Oficio, que se habian encerra la cárcel á Juan Francisco Mayorini.
do en la cárcel de los Manifestados Estando las cosas en este estado, el
con treinta personas que habia para su cabildo de la iglesia mayor con el ar—
custodia, pidiendo á voces que les en zobispo á la cabeza sacó el Santísimo
señasen los presos, á los que querian Sacramento de San Pablo, que era la
ver; y habiéndose determinado pre parroquia mas cercana al Mercado, y
sentarlos á la reja creyendo que aque tambien de la iglesia catedral, donde
llo bastaria, sucedió todo lo contrario, permaneció el clero en oracion, man
porque el pueblo á su vista, viéndose dándose tambien que de los monaste
#ad lleno de entusiasmo, pi rios saliesen procesiones para que se
dió á grandes gritos se les entregasen aquietasen y aplacasen los ánimos de
los presos. Quisiéronse hacer fuertes las gentes exasperadas hasta el último
dentro de la cárcel los arcabuceros; pe punto, y que amenazaban entregarse
ro la gente derribó las puertas de en en la embriaguez de su triunfo á los
trada por fuertes que eran, asi como mas terribles escesos.
las segundas del zaguan, y penetraron A la perturbacion popular se habia
en la cárcel é hicieron huir á los arca reunido la perturbacion de los elemen
buceros, que se escaparon por unos te tos: una horrible tormenta de granizo
jados que daban á la casa del Jus y truenos descargó sobre Zaragoza, é
tiCla. hizo retirar las gentes que ocupaban
Antonio Perez, á quien los mismos sus calles y plazas, y á la copiosa llu
ANTONIO PERFZ. 191

via se debió la dispersion de los triun Grande fué la consternacion en que


fantes amotinados. quedó la ciudad despues del movi
En el ínterin Antonio Perez, desde miento del 24 de setiembre. Algunos
la casa de don Diego de Heredia, donde de los grandes se salieron de la ciu
le habian llevado á descansar algunos dad: otros escribieron al rey; los mas
instantes, montó á caballo acompaña se arrepentian de no haber puesto todo
do de Gil de Mesa, de Mayorini y de en planta para impedir aquel terrible
otros dos valientes lacayos de Bárbo suceso, que necesariamente habia de
les, y salió hácia las puertas de la ciu ocasionar muchos daños, estando segu
dad en direccion á Francia, acompaña ros de que el castigo habia de alcanzar
do de gran multitud, que le seguia aun á los mas inocentes.
aclamando y gritando entusiasmados La ciudad quedó, desde aquel acia
vivas á la libertad. go dia, entregada á sí misma. Mandaba
Antonio Perez les decia : Animo, en ella el populacho: no se tomaba nin
hijos mios, con esa voz no hay que temer, guna resolucion porque no sabian qué
que todo se os hará llano. Tomó el ca hacerse. El gran Justicia don Juan de
mino de la parte de Tauste. Lanuza, era un jóven de poca espe
Aquella tarde y noche caminó nue riencia: solo tenia veinte y siete años,
ve leguas y se dirigió hácia las Cinco y no hacia mas que dos dias que habia
Villas, y despidiéndose alli de los que entrado á ejercer su alta magistratura.
le acompañaban, ¿ solo en un mon El virey, que era el obispo de Te
te con su intrépido amigo Gil de Mesa. ruel, tenia un genio pacato, suave é
Tres dias y tres noches permane irresoluto: el gobernador era un hom
cieron alli ocultos, sin mas alimento bre nuevo, aborrecido del pueblo.
e algunos pedazos de pan y un poco Felipe II, cuyo carácter conocen
e vino, y teniendo que salir de noche nuestros lectores, era un rey severo,
á buscar el agua. celoso de dilatar su autoridad y ju
El gobernador y las autoridades de risdiccion, y pronto á aprovecharse
Zaragoza habian hecho salir emisarios hábilmente de las ocasiones favorables
en su busca. Habian dirigido correos á para arrancar de las provincias los fue
las fronteras de Cataluña, Valencia y ros y privilegios que gozaban desde
Castilla, para que estuviesen á la mira tiempos muy antiguos, y que le men
lo apresasen en el caso de dirigirse guaban su poder.
mácia aquellos puntos, y por pregon Asi es que en el fondo de su cora
ofrecieron el premio de dos mil duca zon se alegró de la ocasion que se le
dos al que entregara su persona, presentaba para hollar los fueros y los
Vanos fueron todos los empeños que privilegios de que tan orgullosos se
se pusieron para perseguirlo. Antonio mostraban los aragoneses. Incitábale
Perez se dirigia á Francia; pero sabe tambien á ello el conde de Chinchon,
dor de que tambien se habia ocupado gran privado suyo, deseoso de vengar
la frontera de aquel pais, retrocedió los insultos y la muerte del marqués
del camino de Roncesvalles que habia de Almenara, de quien era primo her
tomado. Inan 0.

En este conflicto, siguiendo el con El gobernador, que habia sido ven


sejo de don Martin de Lanuza, disfra cido por el pueblo, cuyas tropas habian
zóse, y con su compañero Gil de Mesa, tenido que huir ante las masas popu
ambos volvieron á Zaragoza en la ma lares, escribia carta sobre carta al rey
ñana del 2 de octubre, permaneciendo don Felipe, manifestándole la urgencia
cuidadosamente oculto en la casa de de que se castigase aquel escándalo.
aquel sin dejarse ver de nadie, si bien Los cabezas de las turbas populares se
siendo el alma de los movimientos y mostraban “cada vez mas orgullosos:
de los sucesos que iban á agitar todavía contaban con la plebe y con la gente
la ciudad, hasta el momento en que fué armada resistir al Justicia en el caso
ocupada militarmente por las tropas de que intentasen prender y refrenar
del rey don Felipe II, saliendo de ella los contínuos desafueros á que se en
como veremos el 10 de noviembre, dos tregaban. -

dias antes de la entrada de las tropas. Muchos se salieron de la ciudad,


192 CAUSAS CELEBRES.

viendo el torrente de males que la acudireis y atendereis como á cosa n o


amenazaban: otros conservaban en sus menos precisa que importante, que
casas armas para defenderse en el ca demas de lo que conviene para vues
so de ser atacados; y otros tomaron tro bien, seré de ello muy servido. Da
clara y manifiestamente parte con , los do en San Lorenzo á XXX de setiem
sediciosos y ejercian todo el poder. bre de MDXCI.—Yo EL REY.—M Cle
Don Diego de Heredia disponia á su mente Protonotario.
voluntad de todo el pueblo, tenia la
suprema autoridad, y con él contem Anunció Felipe II tambien el 15 de
porizaban el virey, los jurados de Za octubre á los jurados de Zaragoza que
ragoza, los diputados del réino, todas habia resuelto enviar á la ciudad un
las autoridades, y aun los mismos in ejército con el objeto de que quedase
quisidores, no se mostraban tan exi restablecido el respeto al Santo Oficio
entes y altivos como antes del dia 24 de la Inquisicion, y en uso el ejercicio
e setiembre. El pueblo se habia apo de sus fueros y libertades.
derado de las puertas de la ciudad, y Hizo Felipe II juntar las diversas
no dejaba salir á nadie. tropas que se hallaban acuarteladas en
El dia 1.º de octubre la misma ciu diferentes partes de Castilla, nom
dad envió una embajada al rey Feli brando por su general á don Alonso de
pe II, á cuya cabeza iban el dean de Vargas, aguerrido caudillo de las guer
Teruel, diputado del brazo eclesiásti ras de Italia y Flandes, con órden de
co, don Francisco Luis de Gurrea, ca marchar aceleradamente á Zaragoza,
ballero, llevando cartas del virey, del antes de que los aragoneses pudieran
Justicia, y de los jurados de Zaragoza, ponerse en estado de defensa, hacien
para referir á S. M. lo ocurrido el 24 do correr la voz, para poderlos enga
de setiembre, sin culpar á nadie en ñar, de que el ejército se reunia en
particular, y decir de qué manera ha Agreda para socorrer á los católicos de
bian tratado de auxiliar á la Inquisi Francia.
cion, lamentándose de que no se hu Pero los habitantes tuvieron aviso
biese llevado á efecto su deseo, con el secreto de que aquel ejército iba desti
objeto tambien de solicitar el perdon nado á castigar la sedicion de Aragon,
de S. M. é implorar su clemencia. y se prepararon para hacer una vigo
Cuando llegaron á noticia del rey rosa defensa.
don Felipe II los acontecimientos de El rey despachó tambien cartas á
Zaragoza, vió en su talento claro la las universidades de Aragon, manifes
ravedad de ellos; empero su carácter tándolas que el ejército no se dirigia
¿ y reservado le impedia des sino á mantener el órden.
de luego adoptar una disposicion fran Las universidades ó comunidades,
ca y terminante. No mostró grande al era una reunion de ¿ que tenian
teracion, cual jamás la mostró el rey en por cabeza una ciudad dotada de la ju
las grandes circunstancias de su vida, y risdiccion y señorío, y formaban estas
escribió á la ciudad de Zaragoza la car universidades el cuarto brazo ó esta
ta siguiente: mento de las córtes. Decíales el rey que
no se turbasen ni temiesen por la en
EL REY. trada de los soldados castellanos, pues
su único objeto era restablecer la au
Magníficos, amados y fieles nues toridad del tribunal de la Inquisicion.
tros: habiendo sabido el subceso que Las universidades mandaron á Madrid
tuvo lo que se ofreció el 24 de este, y sus síndicos que formando un cuer
teniendo presente lo que conviene pa po se presentaron al rey Felipe II en
ra la prevencion de lo porvenir, y es el Pardo el dia 14 de noviembre con
cusar la multiplicacion de inconvenien la mayor sumision y respeto, suplicán
tes, me ha parecido advertiros por me dole que no entrase en el reino el ejér
dio de mi lugarteniente general lo que cito de don Alonso de Vargas y ofre
de él entendereis en respeto de guar ciéndose ellos mismos á castigar con
dar la sala de armas: á lo que os espli sus propias fuerzas á los revoltosos.
cáre en mi nombre sobre este punto, El rey los escuchó atento y afable
ANTONIO PEREZ. 193

mente; desechó la oferta de las univer que el pueblo guardaba las puertas y
sidades agradeciéndolas su lealtad, y otros recorrian en turbas el campo ar
les dió una carta para el vice-canci mados y á caballo, persiguiendo vigo
ller del Consejo de Aragon, en que es rosamente á los que lograban salir
cribia: se fuera de la poblacion.
Entretanto don Alonso de Vargas y
Los síndicos de Aragon me han ha el maestre de campo general don Fran
blado hoy en conformidad del papel cisco de Bobadilla reunieron las tropas
que y rá con este, que tambien me die del ejército en la villa de Agreda, tres
ron, y porque los remití á lo que vos leguas distante de la raya de Aragon.
les dixéredes de m y parte, les podeys En muy ¿? tiempo se juntó en el
decir mañana que he holgado de oyr lo infantesdel
campo rey un cuerpo de doce mil
que me dixeron de parte de sus ciu y dos mil caballos, con muchos
dades, y assy lo creo dellas y dellos, caballeros voluntarios de Castilla que
y º bien saben el amor que he te— se ofrecieron á tomar parte en aquella
nido yo á aquel rey no y el cuidado de jornada.
guardarles sus fueros en casi cincuen Antes de ponerse en marcha, te
ta años que me juraron y los gobierno, trada delel ejército
miendo rey que no seria fácil la en
y que esto me obliga al castigo de los en Aragon, viendo el
que los quebrantan, á que ellos tienen entusiasmo que manifestaban los na
la mesma obligacion de ayudar; y que turales de aquel reino por la defensa
de sus fueros, envió á don Francisco
miren bien lo que hacen porque estaré
muy atento á ver como cada una de de Borja y Centellas marqués de Lom
llas cumple con las obligaciones, que bay,
bre
duque de Gandía, hijo del céle
San Francisco de Borja, el 5 de
me tiene y que en lo demas que me noviembre, para que segun las instruc
pidieron con mucha brevedad les da
reys la respuesta de mi parte.—En el ciones escritas que le habia dado, tra
tase de hacer un acomodamiento con
Pardo á 11 de noviembre de 1591.—
Yo EL REY. aquellas gentes para evitar el tener
que recurrir á las armas. Pronto mudó
el rey de resolucion; el marqués de
Mientras tanto la sedicion crecia y Lombay no llegó á marchar á Zaragoza,
dominaba completamente en Zaragoza. alcanzándole una órden del rey en el
Antonio Perez, oculto en la casa de don camino que le mandaba detenerse en
Martin de Lanuza, animaba y, sostenia Calatayud.
el entusiasmo de sus partidarios, y Escribió tambien á esta ciudad y
estos esparcian, con la noticia de la su comunidad para que no se alarma
venida de las tropas, la necesidad de se por la entrada de su ejército, que
defenderse, y las parroquias y oficios, se dirigia á Francia y habia determi
¿ asi se llamaban por la distribucion nado se detuviese en Zaragoza, y á su
el vecindario, pidieron imperiosa paso restituyese el libre ejercicio de
mente armas y solicitaron tomar la su autoridad, deprimida por culpa
guarda y defensa de la ciudad, exi de unos pocos; y asi les mandaba que
giendo que se echase la tropa que ha no se alterasen por la entrada de las
bia, y de lo contrario amenazaban con tropas y porque ejecutasen algunos
que las tomarian por la fuerza. castigos en los culpables, pues los que
Intimidados los jurados con estas no lo fuesen quedarian libres de aquel
amenazas, á pesar de las órdenes ter rigor.
minantes que venian del rey para el Millares de copias de esta carta se
desarme y que se custodiasen las ar difundieron entre el pueblo, y sirvie
mas y se pusiesen en sitio seguro, tu ron de un arma poderosa á los arago
vieron que cederá las amenazas popula neses para escitar á los pueblos á to
res y distribuyeron las armas por par mar las armas, porque entraba en el
roquias, poniendo esto tal consterna reino un ejército estrangero á ejercer
cion en el ánimo de algunos, que mu jurisdiccion violando los fueros, y pi
chas gentes resolvieron salirse de la dieron al Justicia interpusiese su au
ciudad, aunque con gran peligro, por toridad para que lo pidiese.
La exas
194 CAUSAS CELEBltES.
==-2

peracion llegó en Zaragoza á su mas te, caballeros, infanzones, regnícolas


alto punto. del presente reyno, vecinos y domici
Presentáronse, pues, ante el Justi liados en la presente ciudad de Zara
cia los principales caballeros y gentes goza, los cuales dicen que es cosa cier
del pueblo reclamando la conservacion ta y averiguada que don Alonso de Var
del fuero de Calatayud que prohibia as con grande ejército de gente arma
la entrada de las tropas estrangeras en da de á pie y de á caballo va entrando
el reino. en el reyno de Aragon y vie
El documento llamado Requesta en ne sobre la presente ciudad de Zara
que se presentó esta reclamacion, cu goza á ejercer jurisdiccion y hacer
yo éxito habia de tener, tan funesto agravios y daños á los vecinos y mora
resultado para las libertades y fueros dores del presente reyno, á cuya cau
de Aragon, es el siguiente: sa las ¿ personas que viven
en dicha ciudad se han ausentado y
Requesta. dejado sus casas, y de cada dia se au
sentan y las dejan, intimidados de la
In Dei nomine, Amen. -
venida y entrada del dicho ejército,
Sea á todos manifiesto que en el que es bastante y suficiente indicio,
año contado del nascimiento de Nues sin necesitar de otra probanza alguna,
tro Señor Jesucristo de mil quinientos para que V. S.S. conforme á fuero sal
y noventa y uno, dia es á saber que se gan á la defension de las libertades y
contaba á veinte y siete dias del mes fueros deste reyno, por cuanto aquellas
de octubre, en la ciudad de Zaragoza se pueden, deven y han de defender
del reyno de Aragon, en la retreta de libremente y sin pena alguna civil ni
la quadra de la sala baja de la diputa criminal, aunque sea contra cualquiera
cion: ante la presencia de los muy ilus príncipe que las quebrantasse ó quis
tres señores don fray Agustin Navar siese quebrantar, como lo dispone el
ro, Abbad del monasterio de Nuestra fuero del año de 1300, hecho por don
Señora de Piedra, don Martin de Espes, Juan el II, De munitate ecclesiarum et
baron de la Laguna, Gerónimo de Oro, monasteriorum, fólio primo al fin, y
Luis Navarro y Juan de Marcuello, di tambien Micer Miguel de Molina en su
utados del reyno de Aragon, y de mí, repertorio, Sub verbo, libertates regni
¿ de Miedes, Notario estracto de Aragonum, fólio 200 y 7; y siendo di
la diputacion y testigos infrascriptos, cha entrada y venida en lesion y que
comparecieron los muy ilustres seño brantamiento de los fueros y liberta
res don Diego Fernandez de Heredia, des del presente reyno y en daño no
don Pedro Bolea, don Miguel de Sesé, table y grande perjuicio dél, y dichos
don Baltasar de Gurrea, don Juan de don Antonio de Vargas y sus gentes
Aragon, don Juan de Moncayo, don Juan incurran en pena de muerte por venir
Agustin, don Martin de La-Nuza, Ma contra lo dispuesto en el fuero segun
muel don Lope, Cristóbal Frontin, Her do del rey don Juan en el año 1361, fó
nando de Viola, Matheo Ros, Diego lio 12, De generalibus privilegiis; que
de Funes y Cosme Pariente, Caballeros, dispone que cuando:
Infanzones é Hijos de Algo del presente Officiales y personas estrangeras
reyno de Aragon, los quales, todos jun que entraren en cualquiera manera en
tamente y cada uno de ellos de por sy. el presente reyno de Aragon por ejer
dijeron daban y presentaban á dichos cer jurisdiccion alguna ó hacer daño
señores diputados una cédula de re alguno dentro de dicho reyno, ipso
questa, si quier supplicacion, del tenor facto incurran en pena de muerte, y
siguiente:—Muy ilustres señores: Pare se les pueda resistir por cualesquiera
cen ante V. S. S. don Diego Fernandez officiales y singulares personas del di
de Heredia, don Pedro de Bolea, don cho reyno sin pena alguna. Por el mis
Miguel de Sesé, don Baltasar de Gur mo fuero está prevenido que el Justi
rea, don Juan Agustin, don Martin de cia de Aragon, juntamente con los di
La-Nuza, Manuel don Lope, Cristóbal putados del presente reyno ó la mayor
Frontin, Hernando de Viola, Matheo parte, puedan y hayan de convocar á
Ros, Diego de Funes y Cosme Parien costas del mismo reyno las gentes dél
-
ANTONIO PEREZ. 15

¿ resistir á mano armada que no se Se habia desplegado en aquella sº


agan las cosas sobredichas. Y atenta lemnidad, en que se iba á decidir la
la necesidad urgente de remediar se suerte de Aragon, todo el aparato que
mejantes agravios, y que la tardan podia atraer la admiracion y el respe
za seria dañosa, por tanto; Supplican to del pueblo, que inquieto y apiñado
á W. S.S. sin otra ni mas forma man ocupaba todas las habitaciones del pa
den incontinenti poner en ejecucion lo lacio y las calles inmediatas á él.
dispuesto en dichos fueros; y en con Mandó el Justicia leer el fuero de
sequencia desto requieren á V. S.S. Calatayud, y su lectura era interrum
con el debido respeto, que es necesa pida á cada instante por los frenéticos
rio aperciban, convoquen y llamen to aplausos de la muchedumbre. Acorde
dos los Nobles, Barones, Caballeros, Ri el dictámen de los letrados, y sin mas
cos Hombres, Ciudades, Villas, Univer oposicion que la del lugarteniente Mi
sidades del presente re y no para que cer Bardají, y la ausencia de Micer Bau
con ellos el señor Justicia de Aragon tista Lanuza, que se habia salido de la
juntamente con V. S.S., defiendan los ciudad protestando contra cuanto, se
fueros y libertades de mano armada, y hiciese por falta de libertad en la dis
no permitan que en aquellos ni en es cusion, se decidió por unanimidad que
tas haya lesion y quebrantamiento al era conforme á fuero resistir la en
¿ que para ello los arriba nombra trada del ejército del rey, cuya deci
os ofrecen sus personas y haciendas, sion, apenas fué publicada ante el pue
y que asistirán y ayudarán con ellas y blo, fué recibida con estrepitosos aplau
sus hijos, deudos, parientes y amigos sos, corriendo la gente á apoderarse de
valedores á la conservacion de los las armas de la ciudad, pidiendo los
ueros, libertades, usos, observancia arcabuces, lanzas, corazas y cuanto
y costumbres del presente reyno, et habia en ella.
alias, etc., etc. El prior de la Seo, dignidad que se
Sig no de mí, Diego de Miedes, ha guia al arzobispo, elevó una esposicion
bitante en la ciudad de Zaragoza, y á los diputados, en la que, fundándose
por la autoridad real por todos los rey en lo que previene el fuero segundo De
nos y señoríos del ¿? don Phelipe, generalibus privilegiis, consignó re
nuestro señor, público Notario y Nota sueltamente sus ideas, y sentó el prin
rio estracto de la diputacion de Ara cipio de que debia oponerse á la en
gon.-Los testigos de la requesta fue trada de las tropas del rey á todo tran
ron Bartholomé Maynar y Pedro Moni ce, entregando aquel escrito para que
llo, porteros de la diputacion. constase en todo tiempo, que aquel era
su voto, documento importantísimo y
A vista de tan importante docu valiente que trascribimos:
mento en que se exigía una resolucion
tan violenta, quedó vacilante el Justi Por cumplir con la obligacion que
cia de Aragon. tengo al servicio de Dios y del Rey
Tan inesperto era el jóven Lanuza Nuestro Señor y bien general deste
como sus cinco lugartenientes para la reino por los títulos universales y el
decision de un negocio tan grave. Dis particular del puesto en que me hallo,
cordes estuvieron sus pareceres, y pa señaladamente estando ausente el se
ra dirimirlos se señaló el dia 31 de oc ñor Arzobispo á cuya dignidad sucede
tubre para la celebracion de una junta en este lugar la mia, he determina
de letrados. A las once de la mañana do en tiempo de tanta confusion y
de aquel dia, la campana de la diputa miseria ofrecer á V. S. S. lo poco que
cion convocó á capítulo. Presentáron puedo y valgo, que lo emplearé todo
se los jurados de la ciudad con sus tra en ayudar al reparo destas cosas muy
dicionales vestidos de carmesí borda de corazon sin perdonar descomodidad
dos de oro, los diputados del reino, el alguna propia. Y porque lo que ahora
Justicia mayor, varios asesores, doce á mi parecer tiene mas peligro es la
letrados del claustro de la universidad opinion que la gente ha concebido de
y los vecinos mas notables de Zara que el ejército que está en las fronte
goza. ras de Castilla ha de entrar á hacer
4.96 CAUSAS CELEBRES,

daños notables á este reino y señala san hacello; que viéndose públicamen
damente á esta ciudad, ó con rompi te esta determinacion de los consisto
miento abierto, ó con título de ejerci rios que es esta prevencion con que la
tar alguna jurisdiccion, para lo cual gente se asegure del peligro que pueda
tiene mil indicios y avisos de varias temer, esperando todos á que por me
partes que en cualquier tiempo dieran dio de estos dos consistorios y del Se
ocasion de sospechar, y en este parece ñor Virey á quien es muy justo requi
que convence, de donde se podrian se rir y pidir esto, se trate con el general
guir muchos daños si se da lugar á que del ejército de lo que en razon desto
Ja desesperacion de la gente haga sali conviniere para el servicio de Dios y
da alguna, ¿ demas de que seria del Rey Nuestro Señor y bien deste
poner en obligacion á S. M., seria la reino, que toda es una causa, y se des
destruccion total deste reino y por cubrirán muchos medios, pues cuando
ventura de otros; y pues no se puede no pudiere dejar de pasar por el rey
creer que un príncipe tan cristiano no, podrá fiarse deste consistorio el
como el Rey Nuestro Señor con un paso del artillería y otras armas y mu
reino tan fiel como este quiera usar niciones, dando si fuere menester se
de un medio tan áspero y tan contra guridad y aun algunas personas prin
rio á sus leyes sin habelle puesto en cipales en rehenes; y pasando los sol
ninguna obligacion como es notorio; dados desarmados como por los reinos
no es justo que ningun hombre crea de Castilla, estarán ellos y nuestra
que con voluntad de S.M. se hará tal gente mas segura, pues cuando entra
cosa; y cuando se hiciese por insolen sen de otra manera y sin querer hacer
cia de hombres apasionados (que no daño con cualquier disgusto que en los
es creible que en este caso se vea) es alojamientos se ofreciese, que es cosa
muy justo resistilles por los medios que apenas se puede escusar, se ve
que las leyes deste reino, dadas por ria en este tiempo todo el reino en
nuestros Reyes permiten y disponen. peligro grandísimo; y en librarnos dél
Y pues por una parte esta intencion entiendo que harán V. S. S. su oficio
no se ha descubierto aun por obras ni S servicio muy acepto al Rey Nuestro
consta dello evidentemente, y por otra eñor, juntando con esto el tratar del
los avisos que hay y la voz comun y reparo de las cosas pasadas por los
otros indicios obligan á estar apercivi medios que este consistorio tiene en
dos y desviar todas las ocasiones que caminados, que son muy conformes á
puede haber de que esto se sospeche; su buen celo. Y porque del mio conste
me agº que debia representará en cualquier tiempo, suplique áV. S.S.
V. S. S. por cosa conveniente que con mandes que quede este acto entre los
la voz que corre y los avisos que hay, munes del reino.—El Prior de la
se trate de parte deste consistorio con el 61.
Señor Justicia de Aragon, del remedio,
y conforme al fuero 2 º De generalibus Declarada asi la guerra al ejército
privilegiis parece que seria dar razon que iba á invadir el territorio de Ara
con el término debido á todo el reino gon retirose el pueblo ébrio de fana
para que estén apercibidos por lo que tismo y de entusiasmo y el Justicia
puede ser, y tratar lo mismo con los ju mayor se dedicó á nombrar los oficia
rados desta ciudad para que asi se haga, les y capitanes necesarios para orga
asegurando juntamente á todos de que nizar la resistencia.
no se debe hacer ninguna salida de he Requirió al duque de Villahermosa
cho hasta tener mas entera noticia de lo y al conde de Aranda para que presta
que se intentare, pues se tratará lue sen auxilio contra el rey y les diesen
go de averiguallo, ó tratando de que el unas piezas de artillería que tenian en
ejército en caso de que no se pueda Pedrola y en Epila, y las trajeran á Za
excusar que pase por el reino por ser ragoza para su defensa, y á buscarlas
necesario para la jornada que hace, fué un pelaire llamado Fuertes, con
una gran turba.
pase de manera que no haya ocasion de
temer dellos ningun daño, ó desenga En ocho dias había de organizarse
ñándose por este camino de que pien la resistencia contra los famosos ter
ANTONIO pEREZ 1 07
E= =

cios castellanos, porque para el 8 de sente reyno que nos pareciese necesa
noviembre se habia señalado la revis ria para expeler y echar del dicho rey
ta general de las tropas populares. El no á mano armada al dicho don Alonso
Justicia escribió tambien cartas á las de Vargas, al exército y gente estran
ciudades y pueblos del reino, mandan gera que trae á costas del presente
doles que acudiesen con gentes arma reyno, et Nos, habida informacion, y
das, y nombró general de la caballería constándonos de lo que conforme á fue
á don Diego Heredia, de la artillería á ro constar nos deve, nos avemos ofres
don Rodrigo de Bolea, de la gente de cido prestos y aparejados á hacer lo so
la montaña á don Martin Lanuza, y bredicho, como mas largamente pare
maestre general á don Luis Bardají; ce por el processo y processos: por
empero sin tener tropas, municiones, tanto en ejecucion de lo sobredicho
armas ni ejército. Organizó tambien un avemos mandado despachar las pre
consejo de guerra, dando asiento en él sentes en la forma arriba dicha y si
al duque de Villahermosa y al conde guiente, en virtud de las cuales, de
de Aranda, los cuales aceptaron este parte de S. M., á vosotros los sobredi
nombramiento, si bien con ánimo de chos Prior general y regidores de la
cidido de hacer traicion á la causa que comunidad y tierra de Albarracin, os
defendian y servir mejor las intencio intimamos, decimos y mandamos que
nes del rey, con quien hacia mucho para el quinto dia de los presentes mes
tiempo se hallaban en activas comuni y año abajo calendados, nos envieis á la
caciones. -
presente ciudad con trescientos hom
Escitó tambien el Justicia mayor bres de á pie y de á caballo cincuenta,
por medio de una carta, el 1.º de no— con sus armas, que sean los mas útiles
viembre, el patriotismo de los diputa y pláticos en el arte militar; y esto sin
dos del reino, y á cada una de las uni impedimento ni dilacion alguna para el
versidades para que contribuyesen con sobredicho dia precisamente, y para
as tropas que pudiesen, espidiendo la los fines y efectos arriba dichos, ofre
siguiente convocatoria: ciéndonos puestos y aparejados á cos
tas del dicho reyno pagarles sus suel
Nos, don Juan de La-Nuza y de Pe dos, alias lo contrario haciendo, pro
rellos, caballero y del Consejo de Su veeremos contra vos, y cada uno de
Magestad, Justicia de Aragon, don fray vos, y contra vos, conforme á los fue
Agustin Navarro, abbad del monaste ros del presente reyno.—Dat. en Zara
rio de Nuestra Señora de Piedra, don goza el 1.º dia del mes de noviembre
Juan de Luna, señor de Purroy, don del año 1591.
Martin de Espes, baron de la Laguna, El Justicia de Aragon.—El Abbad
Gerónimo de Oro, Luis Navarro y Juan de Piedra.—Don Juan de Luna.—Luis
de Marcuello, dipputados del reyno de Navarro.—Juan Marcuello.—Gerónimo
Aragon, á vos, Prior general, regidores de Oro.
de la ciudad y tierra de Santa María de
Albarracin, salud y aparejada volun Mientras Antonio Perez, desde el
tad.—Por cuanto se ha recurrido ante fondo de su retiro observaba la marcha
Nos con grave querella, diciendo que de los sucesos; veia como hombre es
don Alonso de Vargas con grande exér perimentado cuán débiles eran los ele
cito de gente de armas de á pie y de á mentos con que se contaba para la re
caballo, estrangeros del presente rey sistencia contra un monarca tan pode
no, van entrando en él y vienen sobre roso como Felipe II; sin embargo, ani
la presente ciudad de Zaragoza, á ejer maba á don Diego de Heredia y á don
cer jurisdiccion y hacer agravios y da Martin de Lanuza, que habian sido
ños á los vecinos y moradores della y nombrados caudillos de las tropas, co
del presente rey no en sus personas y mo hemos dicho, si bien se proponia
bienes, contra los usos, fueros y liber salir de Zaragoza en el mismo momen
tades del presente reyno, y assy juxta to en que se presentasen las tropas del
el fuero 2.º só la rúbrica de Generali rey, no teniendo el valor y el corazon
bus privilegiis regni Aragonum, man necesario para morir en defensa del
dásemos convocar las gentes del pre pueblo que se habia levantado por su
498 CAUSAS CELEBRES.
===

causa y que iba á pagar la resolucion corto número, porque no pasaban de


ue por él habia adoptado, con la pér cuatro mil hombres, y estos sin ins
¿, de sus libertades y la muerte de truccion, sin arcabuces, y muchos has
ta sin municiones.
sus mas distinguidos é ilustres hijos.
Baldon eterno que no podrán borrar Contaban con desprecio á sus ene
de su frente las grandes calamidades migos, y corria entre ellos la noticia
y miserias que acibararon una existen de que cuando habian ido los comisio
cia que debió de haber perdido como nados de parte del Justicia mayor al
valiente en Zaragoza, y que salvó con monasterio de Beruela donde se alla
una vergonzosa fuga, entregando á la ba acampado don Alonso de Vargas á
venganza del rey á sus mejores amigos, notificarle la sentencia de muerte pro
y arruinando la libertad de su pais. nunciada contra él segun fuero, no
Era tal la exasperacion de los áni solo los habia oido, sino que les habia
mos en Zaragoza, al ver que se iban dado escolta para que nadie se metiese
allegando fuerzas, que se vió precisado con ellos. Daban ellos el colorido de
el virey á dirigir el 28 de octubre dos temor á este acto de desprecio con que
emisarios á Vargas, pidiendo en su nom los habia mirado aquel consumado ca
bre y en el del reino y de la ciudad, que itan.
suspendiese la entrada hasta que reci En medio de lo descompuesto y he
biese nueva órden de S. M., y al mis terogéneo de las tropas populares era
mo tiempo le suplicó al rey que lo brillante en lujo el escuadron de la
mandase asi, y que en caso contrario nobleza de la ciudad, que en medio
lo avisase para poderse él refugiar con llevaba el tradicional estandarte de
sus consejos en la Aljafería, propo San Jorge. Iba á su frente el Justicia
niéndole convocar las córtes en Cala mayor don Juan de Lanuza, acompa
tayud é irlas prorogando y entrete— ñado de algunos lugartenientes y ju
niendo hasta que se encontrase reme rados de la ciudad, del diputado dºn
dio á los males que afligian á la ciudad. Juan de Luna, y de los señores duques
La córte del Justicia y la diputa de Villahermosa y de Aranda que for
cion volvieron á repetir sus cartas á maban parte del supremo consejo de la
todas las ciudades, villas, barones y guerra.
caballeros para que viniesen con gen Poniéndose en el centro de la línea
te y armas; hicieron un llamamiento el Justicia mayor, cogiendo el estan
á las gentes de la montaña, y escribie darte, lo desplegó al aire dando ¿
ron á los reinos de Valencia y al prin tres veces el grito de Guerra y San
cipado de Cataluña para que le ayuda Jorge por Aragon!
sen con arreglo á los pactos que exis Un viva unánime á la libertad y á
tian entre aquellos tres reinos. los fueros, fué la respuesta de las tro
Entretanto, crecia el entusiasmo pas populares y de la multitud de es
que se manifestaba en la poblacion; pectadores de aquella imponente es
cada cual contribuia con lo que podia: C62Ild.
los albañiles ofrecian restaurar las ta En medio del entusiasmo no deja
pias de la ciudad á su costa; los ricos ban de conocer las gentes reflexivas
ya por entusiasmo, ya por el temor de que aquella era una empresa descabe
ver saqueadas sus casas, ofrecian cuan llada, al ver el corto número de las
tiosos donativos, y empezó á organi gentes que se habian podido reunir, al
zarse la gente armada. ver que de todas las comunidades solo
Sin embargo, contaban con pocos habian venido algunos montañeses, y
elementos. Asi es que para el 8 de no que era escaso el número de los solda
viembre, dia en que trataron de reu dos de los señoríos; al considerar que
nir y pasar revista al ejército popular la caballería se hallaba solo compuesta
ue se habia improvisado, en el campo en su mayor parte , de labradores de
¿? Toro, se vió queaquella milicia no Zaragoza y que habian acudido pocos
contaba con órden ni elemento alguno caballeros, formando un reducido es
de organizacion. A falta de disciplina cuadron mas propio para parada, que
mostraban grande entusiasmo los que "para combate, y que toda la artillería
en ella se habian alistado, aunque en consistia en siete cañones de poco ca
ANTONIO PEREZ, 199
-s
=SAerº

libre que habian hecho traer de Pedro estos magnates querian mostrar su ad
la, fortaleza del duque de Villahermosa, hesion á la causa del rey, en la córte
y de la fortaleza de Epila, propia del de Felipe II se juzgaba de muy diversa
conde de Aranda, al pelaire Pedro de manera su conducta: habia sucedido á
Fuertes. los duques de Villahermosa y al de
El mismo Justicia mayor sentia un Aranda lo que sucede siempre á los
desaliento profundo en su corazon, que hombres políticos, indecisos y tibios:
en vano procuraba disimular, al ver habíanse ¿ sospechosos á ambos
ue al paso que avanzaban las tropas partidos; eran odiados del partido po
e don Alonso de Vargas no le venian pular de Aragon, y el rey les mi
á él los socorros que aguardaba de Ca raba con grande desconfianza y oje
taluña y de Valencia: los reinos se ha I'lZ d.
bian mostrado sordos al llamamiento Cada dia iba cundiendo la descon
de los zaragozanos, y de las ciudades fianza en el ejército ¿ de Aragon.
del reino, fuera de Teruel y de Albar Muchos al ver la insubordinacion que
racin, eran cortísimos los socorros que iba creciendo en sus reducidas filas se
habia recibido. Veia tambien el estado volvieron á su casa, principalmente
de indisciplina en que se hallaba aquel los soldados de los señoríos; los monta
reducido ejército, en términos de que ñeses se retiraron tambien, y el ejér—
habiendo reconvenido el duque de Vi cito vino asi á reducirse á dos mil
llahermosa á algunos voluntarios que quinientos hombres. Entonces fué tal
en aquella revista estaban riñendo con el recelo y la sospecha que se llegó has
voces y atrevimiento descompasado, ta dudar del Justicia mayor, á quien
mas de cuarenta mosquetes con mecha llamaban á boca llena traidor y cobar
encendida se apuntaron contra él y el de, y le rodeaban, desconfiados, de una
conde de Aranda con gritos de mue guardia especial que vigilaba sus pasos
ran esos traidores! y observaba todas sus acciones,
Entonces salieron huyendo delante Entretanto iban avanzando las tro
de todo el ejército á todo escape en suspas de Castilla. Súpose el 1º de di
briosos caballos, y aun cuando les dis ciembre que habia entrado el ejército
¿ persiguieron llamándoles vi real en Pedrola sin resistencia ni opo—
es, traidores y enemigos de la patria, sicion alguna, y que una de sus divi
pudieron refugiarse en el monasterio de siones bajaba en direccion del Alagon.
Santa Engracia; pero descubierto su Presentáronse las turbas populares
asilo tuvieron que descolgarse por las al Justicia mayor, amenazándole con
paredes de la huerta, no sin grandes una muerte inmediata si no convocaba
trabajos y peligros, y caminando á en el momento las tropas para defen
pie durante una noche tormentosa y der el paso del Alagon antes de que lo
fria llegaron á Epila estenuados de ocupase el ejército del rey. -

hambre y de cansancio. Epila tenia En vano fueron las razones del Jus
buenos muros, y alli colocaron gente ticia mayor. Tuvo que salir acompaña
en las puertas para guardarlas, con una do del diputado don Juan de Luna,
pieza de artillería de las que no habia del jurado don Juan de Metelli, llegan
podido llevarse el pelaire Fuertes. do hasta una corta jornada de la ciu
Desde aquel pueblo escribieron á dad con los voluntarios que quisieron
don Alonso de Vargas contándole lo seguirle, gente mal disciplinada, sin
º les habia sucedido, y solicitando ninguna subordinacion, y que se amo
e él que les permitiese entrar en Za tinaba á cada momento contra él, com
ragoza con el ejército para dar una poniendo entre todos escasamente dos
prueba de que seguian las banderas del mil hombres, número impotente para
rey y vengar las injurias que los ara resistir al empuje del ejército caste
goneses les habian hecho. El conde de llano, pero que caminaban muy altane
Aranda decia que entraria muy con ros con el estandarte de San Jorge, y
tento en la i si podia adornar el el Justicia mayor á la cabeza.
retal de su caballo con cabezas de la Alonso de Vargas hubiera podido
radores. con una sola compañía esterminarlos,
A pesar de las espresiones con que pero no quiso derramar sangre inútil
200

mente, siguiendo las instrucciones que al ver el giro que tomaban los negocios
le habia dado el rey. públicos, envió á Gil de Mesa para Pau
Llegaron las tropas aragonesas al el 18 de noviembre con una carta de
amanecer hácia Utebo, dos leguas de Antonio, Perez para la princesa de
Zaragoza. Entonces el Justicia mayor, Bearne, hermana de Enrique IV, rey
que ya se hallaba de acuerdo con don de Francia, doña Catalina de Borbon,
Juan de Luna, su único amigo, que acogiéndose á su amparo y hospita
veia que era una locura á la que le lidad, documento notable é interesan
conducian las turbas desenfrenadas, le te, que ¿ literalmente, porque
hizo una seña, y fingiendo querer su— revela la disposicion de ánimo del fu
jetar su brioso caballo le metió espue gitivo ministro.
las, y seguido de don Juan de Luna y
del jurado Metelli, huyeron á toda car SERENISIMA SEÑORA.
rera hasta Epila donde se encontraba
su madre doña Catalina de Urrea, bus Antonio Perez se presenta ante Vues
cando alli su seguridad, desamparan tra Alteza por medio deste papel y de
do el estandarte de San Jorge y la cota la persona que le lleva. Señora, pues
de armas de Aragon que llevaba pues no deve de aver en la tierra rincon ni
ta como distintivo de su supremo escondrijo á donde no aya llegado el
mando. sonido de mis persecuziones y aventu
Esta fuga tan singular, tan repen ras, segun el estruendo dellas, de
tina, hizo que se dispersasen los espe creer es que mejor avrá llegado á los
dicionarios. Don Diego de Heredia se lugares tan altos como Vuestra Alteza,
huyó á la montaña, y es a dispersion la noticia dellas. Estas han sido y son
llevó la consternacion á Zaragoza. tales por su grandeza y larga durazion,
Don Martin de Lanuza, que todo lo º me han reduzido á último punto
vió perdido, hizo entonces salir de la e necesidad, por la ley de la Defensa
ciudad á Antonio Perez, el cual huyó y Conservazion natural á buscar algun
disfrazado en compañía de su insepa puerto donde salvar esta persona y
rable amigo Gil de Mesa, el dia 10 de apartarla desta mar tempestuosa, que
noviembre. en tal braveza la sustenta la Passion de
Desde Epila circuló el Justicia car ministros tantos años ha, como es no
tas al reino, el 11 de noviembre, dan torio al mundo. Razon, señora, bastan
do esplicacion de las causas y razones te para creer que he estado como me
que habian motivado su desercion, po tal á prueba de martillo y de todas
niendo entre las principales el que la pruebas. Supplico á Vuestra Alteza me
gente , que llevaba eran pocos y mal dé su amparo y seguro, donde pueda
avenidos y disciplinados, y que se amo conseguir este fin mio, ó si mas fue
tinaban á cada credo, triste disculpa de re su voluntad, favor y guia para
su defeccion. que yo pueda con seguridad passar á
En el mismo dia 11, víspera de la otro príncipe de quien reciba este be
entrada del ejército real, admitieron neficio. Hará Vuestra Alteza obra de
los sediciosos la pretension de don bida á su Grandeza, pues los Príncipes
Martin Lanuza de que se abriesen las tienen y deben exercitar en la tierra
puertas de la ciudad á todos los que la naturaleza de los elementos, que,
se hallaban comprometidos, si no se para conservazion del mundo, lo que
trataba de resistir hasta el último es un elemento sigue y persigue, otro
tremo, en cuyo caso moriria él el pri acoge y defiende. Y como á los prínci
Ill62 "O. pes se les presentan y admiten gracia
Salió don Martin Lanuza de la ciu y curiosidad los animales raros y móns
dad, y fué á reunirse con Antonio Pe truos de la naturaleza, á Vuestra Al
rez en Sallent, despues de haber su teza se le presentará delante un
frido las mayores privaciones cami Mónstruo de la fortuna; que siempre
nando por despoblados y de noche. fueron mayor admiracion que los otros,
Creyéndose alli seguro en su castillo como effecto de causas mas violentas.
don Martin de Lanuza, y resuelto á de Y este lo puede ser por esto y por ver
fenderlo hasta sepultarse en sus ruinas, con que no nada se ha tornado y em
ANTONIO PEREZ. 201

bravecido tanto tiempo ha la fortuna, Antonio Vargas entraron en la ciudad


y por quien se ha travado tan al des el 12 de noviembre sin resistencia al
cubierto aquella competencia antigua guna. Antonio Perez con don Martin
de la fortuna con la naturaleza, y la de Lanuza habia huido á Francia; el
porfía natural de la passion de la una Justicia mayor habia ido á Calatayud á
con el favor de la otra y de las gentes. verse con el marqués de Lombay, y á
—De Sallen, á 18 de noviembre de disculparse de lo que habia sucedido,
1594.—ANTONIO PEREz. persuadido de que habia obrado con
forme á los fueros y que con arreglo á
La princesa Catalina de Borbon se ellos debia resistir al ejército del rey.
prestó gustosa á dar á Antonio Perez Ningun acto de crueldad , ni de rigor
la hospitalidad que solicitaba. Mas ejerció Vargas á su entrada en la ciu
antes de que pudiese recibir su con dad. Muy al contrario, se dirigió al rey
testacion se vió precisado Antonio Pe proponiéndole que otorgase un perdon
rez á abandonar precipitadamente su general, con escepcion de muy pocas
asilo, porque marcharon á prenderle los personas. Envió á llamar al Justicia
señores de Pinilla y de Concas, acom mayor, á los diputados, al duque de
pañados de trescientos hombres, por Villahermosa y al conde de Aranda,
que de su prision y captura dependia manifestándoles que las intenciones
el perdon que les habia ofrecido don del rey, eran la conservacion de los
Alonso de Vargas. fueros y castigar únicamente á los que
Toda la noche del 24 de noviembre habian perturbado el órden público,
anduvo disfrazado, en medio de contí procurando que volviesen las gentes
nuos peligros, por sendas estraviadas que habian salido de Zaragoza, dando
cubiertas de nieve, y al borde de con á entender que su ejército era de ami
tínuos precipicios. gos, y no omitiendo nada para sosegar
Llegó por fin Antonio Perez este los ánimos.
nuado, muerto de cansancio, á Pau, el El duque de Villahermosa y el con
26 de noviembre, y alli se dió á cono de de Aranda se presentaron inme
cer: alli cesaron sus trabajos: á las diatamente, no temiendo daño alguno.
persecuciones sucedió un brillante re El marqués de Lombay recibió órden
cibimiento: los gentiles hombres de la del rey de marchar á Zaragoza; convo
princesa lo condujeron á su presencia, có á los señores y caballeros de la ciu
aun sin darle tiempo de mudar su des dad, los que nada, acordaron porque
trozado trage, porque estaba impacien manifestaron que habiendo jurado los
te por verlo: lo recibió afable y cariño fueros no podian deliberar mientras
sa, porque pensaba sacar gran partido que, con infraccion de los mismos, per
de su talento, y, sobre todo de los maneciese dentro de la ciudad un ejér
grandes secretos de Felipe II, de que cito castellano. Respuesta firme y he
era poseedor. róica en momentos en que la ciudad es
Don Martin de Lanuza se vió preci taba ocupada por un ejército.
sado á acompañar á pocos dias en la Al ver la conducta templada y llena
proscripcion a su amigo, porque vió de moderacion del general don Alonso
que eran inútiles los pactos y conven de Vargas, y del marqués de Lombay,
ciones que para conseguir su perdon fueron volviendo las gentes que habian
se habian planteado. huido los primeros dias, y hasta el
Ya en Pau Antonio Perez, escribió mismo Justicia de Aragon entró en la
por medio de la princesa doña Catali ciudad y comenzó á ejercer de nuevo
na de Borbon al rey Enrique IV, que sus funciones como si nada hubiera su
se hallaba en París, el que le recomen cedido.
dó á su hermana, y se propuso llamar Gozábase de tranquilidad y sosie
le á su lado cuando lo creyese mas go en Zaragoza, y parecia que las co
conveniente á sus intereses. sas habian concluido; el marqués de
Desamparados los de Zaragoza por Lombay se hallaba morando en casa
los que les debian de haber defendido, del duque de Villahermosa, su tio,
y aun perecido con ellos, cayeron en el alli se reunian los jefes del ejército. E
mayor desaliento. Las tropas de don marqués, que recibido sus ins
6
202 CAUSAS CELEBRES

trucciones del rey, le daba cuenta de se detenido de repente por el capitan


todo, mientras Vargas hacia observar Juan de Velasco con una compañía de
la disciplina mas rigorosa á la tropa, arcabuceros, que le intimó se diese á
manteniendo siempre un cuerpo de prision en nombre del rey. En vano
guardia en todas las plazas y sitios pú protestó el Justicia, y quedaron atur
blicos y la artillería situada en la calle didos de asombro los lugartenientes
del Coso, que es muy ancha y larga, cir y él: Don Juan de Lanuza fué preso y
culando contínuamente rondas de in conducido entre los soldados fuera de
fantería toda la noche dentro de la ciu la puerta del Angel al alojamiento del
dad, y patrullas de caballería por general don Alonso de Vargas, y des
fuera. pues al de el maestre de campo don
De estrañar era esta conducta en el Francisco Bobadilla. Al mismo tiempo
carácter de Felipe II, y cuando la gen fueron presas otras muchas personas,
te iba creyendo ya que el rey se habia entre ellas el duque de Villahermosa y
decidido por un sistema de concilia el conde de Aranda, siendo el primero
cion é indulgencia, se vió cuando to llevado al castillo de Burgos, el segun
dos menos lo esperaban, desarrollarse do á la fortaleza de Coca. -

de pronto un plan de venganza que ha En aquella misma tarde se intimó


bia fria y calculadamente meditado, y al Justicia la órden para que se prepa
cuyo terrible anuncio fué la siguiente rase á morir al dia siguiente. Inmedia
órden que recibió el general don Alon tamente se hizo entrar en su estancia
so de Vargas: al jesuita padre Ibañez, su confesor.
Arrojóse en sus brazos, y lamentándo
«En recibiendo esta, prendereis á se de morir tan jóven preguntaba mu
Juan de Lanuza, Justicia mayor de chas veces por qué causa se le hacia
Aragon y tan pronto sepa yo su muer perecer; pero solo se le dió por res
te como su prision. Haréisle luego cor puesta que moria por sus pecados.
tar la cabeza y que diga el pregon assi: A la mañana siguiente toda la tro
esta es la justicia que manda hacer el pa se hallaba puesta sobre las armas;
rey nuestro señor en este caballero por la artillería se hallaba situada por to
traidor y convocador del reino, y por das las bocas-calles y ninguna persona
haber levantado estandarte contra su transitaba por ellas. Al amanecer, con
rey, manda que le sea cortada la cabe grillos en los pies, pero con ánimo fir
za, confiscados sus bienes y derribados me y resignado, salió el Justicia para
sus castillos y casas: quien tal hizo que la plaza del Mercado vestido con el
tal pague.» mismo trage de luto que por la muerte
de su padre aun llevaba. Fué conduci
El dia 19 de diciembre de 1594 se do en un coche hasta el lugar del ca
recibió esta órden, y parecia que el dalso, que se habia levantado durante
cielo mismo se cubria de luto al espec la noche, y en el tránsito, cuando oyó
táculo que iba á prepararse, porque que el pregonero decia que se le impo
pardas nubes oscurecian la atmósfera. nia la pena de muerte por traidor, vol
El Justicia mayor de Aragon, Juan de víéndose á él le dijo con dignidad:
Lanuza, fue preso de una manera pare «Traidor, no!»
cida á como lo fueron los condes de Tres sacerdotes le acompañaban;
#
Egmont Horn por el duque de Alba, el padre Ibañez, fray Pedro Leonardo
que al salir del consejo de Estado á que de Argensola, agustino, y otro religio
los habia convocado el duque de Alba, so de la misma órden. El cadalso se
fueron presos y subieron despues al hallaba cubierto enteramente de negro;
cadalso. subió á él con paso firme, pronunció
Se parodió este horrible drama en algunas pocas palabras con gran valor,
Zaragoza. Salia el Justicia á las doce abrazó á los religiosos, se desabrochó
del dia del palacio de la diputacion, el cuello y los puños, se arrodilló y se
donde habia asistido al despacho de colocó de la manera que le habia indi
los negocios del reino, con sus lugar— cado el verdugo, y entonó la tierna ple
tenientes, para oir misa en la iglesia garia Maria, mater gratiae. Al pronun
de San Juan, como acostumbraba. Wió ciar el último versículo, descargó el
ANTONIO pEREZ. 203

verdugo el golpe terrible. Cayó sobre guia en la Inquisicion. Al mismo tiem


su cuello el hacha fatal, y rodó sobre po que estas noticias, le llegaba tam
el tablado la cabeza del Justicia ma bien de Madrid la de la estrema y cruel
ror de Aragon y con ella los fueros de prision en que habia puesto á su mu
a mas antigua é independiente de las ger doña Juana Coello y sus hijos, el
monarquías!..... implacable presidente de Hacienda, su
Cogióla el verdugo, y la mostró á la enemigo, Rodrigo Vazquez y Arce.
escasa concurrencia que alli habia, Entretanto, don Alonso de Vargas
dieron un redoble los tambores, y se ofrecia en Aragon seis mil ducados al
inclinaron las banderas saludando al que entregase la persona de Antonio Pe
que habia ejercido hasta entonces la rez. Algunas personas fueron esclusiva
dignidad suprema de aquel reino. Asi mente desde Zaragoza á Pau con este
terminó su vida el último de los Justi objeto, y Catalina de Borbon hizo salir
cias de Aragon á la temprana edad de desterrados de aquel punto á varios
veinte y siete años. Tres meses ejerció ¿ para alejar el peligro en que
su dignidad. Eran débiles sus hombros se hallaba el huésped que habia reco
para tanto peso. gido en sus Estados.
Los caballeros y capitanes mas no Escribió éste á Enrique, rey de
bles del ejército, do Francisco de Bo Francia, la siguiente carta:
badilla, el conde Puñoenrostro, el con
de de Oñate, don Agustin Mejia y don SEÑOR:
Luis de Toledo, llevaron á sepultar su
cadáver en hombros al monasterio de Las persecuziones que yo he pades
San Francisco, volviéndose á abrir el cido XIl años ha en los reynos del Rey
sepulcro donde tres meses antes habia Cathólico, han sido tan fuertes en gran
sido depositado su padre, el anciano deza y durazion y variedad, que me
Justicia don Juan de Lanuza. han reducido á necesidad forzosa de
La muerte del Justicia fué la señal apartarme dellos, y á venirme á los
de la venganza real. El antiguo palacio de V. M. á salvar mi persona con su
de los Lanuzas fué destruido hasta en fabor y proteccion. Y aunque por el
los cimientos, habiendo cometido antes respecto devido á tales Príncipes, yo
la barbárie de lanzar de él á su anciana procuré tener primero licencia de Ma
y afligida madre doña Catalina de Ur dama Hermana de V. M., apretóme la
rea. El castillo de Bardallur, propio de necesidad de manera que huve menes
Lanuza, fué arrasado completamente, ter, sin esperar respuesta, pasar á es
se confiscó toda su hacienda, y para tos estados y ponerme á los pies del
indemnizar al hermano del Justicia, amparo de su Alteza, adonde ¿é y
don Pedro Lanuza, le hizo el rey conde hallé que ya su Alteza avia respondido
de Plasencia y caballero de Santiago. que ternia por bien recogerme. Yo no
En Pau recibió Antonio Perez la he dado quenta áV. M. hasta agora des
noticia de la muerte del Justicia ma to, esperando á que su Alteza lo hicies
yor de Aragon y las ejecuciones dia se y esta ocasion. Lo que embié á su
rias que se hacian en todas las ciuda
plicar á su Alteza fué su amparo y se
des de aquel reino. Hallábase entonces
guro, y donde poder conseguir mi in
ocupado en escribir dos folletos que, tento, que es salvar mi persona y apar
sin nombre de autor, fueron publica tarla de la violencia y persecuzion de
dos é hicieron gran ruido y sensacion ministros de la Magestad Cathólica, ó
en aquella época en el mundo. Titulá si mas fuesse su voluntad, favor y queja
base el uno «Pedazo de historia de lo para que con seguridad pueda passar y
sucedido en Zaragoza de Aragon el 24 ilegará otro Príncipe de quien reciba
de setiembre de 1591,» y el otro «Su este benefizio. Esto es lo que yo sup
mario del discurso de las aventuras de plico á V. M. y que muestre su Real
Antonio Perez desde el principio de su ánimo y natural grandeza en el subge
primera prision, hasta su salida de los to y persona mas perseguida que jamás
reinos del rey Católico.» Sobre estos se ha visto, y mas inútil y sin mérito
dos escritos se le formó despues un ca aun para merescer tan grandes perse
pítulo de culpas en la causa que se le se cuziones. Porque á ni opinion y á la
204 CAUSAS CELEBRES.
-
-

razon de la esperienzia, los Príncipes rada de él, y valiéndose de sus gra


se califican á sy con los beneficios que cias y artificios de muger pretestando
hacen, y á los vassallos y inferiores además una cacería, á cuyo entreteni
con las persecuziones que les dan. Y miento era muy aficionada dicha seño
crea V. M. que por la reverencia devi ra, le atrajese á una casa de campo que
da á todos los Príncipes, yo no me pre poseia en la frontera para poder ser ar—
sentára en sus reynos de V. M., ni pa rebatado por tropas españolas. Acepta
resciera entre gentes, si hubiera salido do este infame trato la dama, que debia
de España apartándome del lado y ser mentir una pasion amorosa, la concibió
vicio de mi Rey, y no de las prisiones real y verdadera por Antonio Perez,
de XII años y de encanto del juyzio de ora la cautivara el encanto de su con
mis causas: y sino truxera conmigo la versacion fascinadora, ora el prestigio
provanza que traygo de la voz comun que rodeaba á un hombre á quien sus
y juyzio general: pero con esto y el tes desgracias habian hecho conocer en to
timonio que puede hacer de mi vida y da Europa. Lejos de cooperar á su pri
acciones el no aberme acertado á aca sion, le advirtió de sus peligros y des
bar tanta y tan larga violencia, me cubrió las tramas urdidas por el rey
atrevo á parescer delante de V. M. por Felipe II, y le ofreció hasta perder por
medio deste papel y á supplicarle lo él su vida.
que he dicho; y que me mande decla Valióse todavía la política suspicaz
rar su voluntad, como mas particular de Felipe II para deshacerse de Antonio
mente he pedido á Mos de Yolet que lo Perez de un medio del cual no era fá
haga de mi parte. Al mismo he dado cil salvarse. Hemos visto que uno de
un pedazo de informacion del discurso los principales caudillos de la revuelta
de mi fortuna, por si V. M. quisiera de Zaragoza, uno de los hombres que
saber della algo mas de lo que se con con mas fuerza habian defendido á Pe
tiene en esta carta. Lo cual asseguro rez, era Gaspar de Búrces, aquel zapa
á V. M. sea tanta verdad que las copias tero que unido al estudiante Gonzalez
auténticas en algunas partes del mun y á Gil de Mesa, habia quedado por al
do, sacadas del processo original que gunos dias dueño de la capital de Ara
se formó en aquel juizio supremo del on. Entró éste en tratos con don
Justicia que llaman de Aragon. Que lonso de Vargas y el virey de Aragon,
como fortuna tan fuerte y rara ha pues que le prometieron su indulto, la vuel
to cobdicia á las naciones de saber la ta á España, y una gran recompensa
verdad y orígen y discurso de tan gran de dinero, si envenenaba á Antonio
des aventuras y trabajos, en que po— Perez. Fué descubierta su trama: acu
drán hallar las gentes consuelo, ejem sado ante un tribunal, confesó el mi
plo y escarmiento. Dios prospere la vi serable su crímen, por el cual fué con
da y grandeza de V. M.—De Pau, 9 de denado á muerte. Cuando iba á ejecu—
diciembre de 1591.—ANToNIO PEREz. tarse la sentencia en Burdeos, pasó por
alli Antonio Perez acompañando á la
El rey le contestó con el mayor ca princesa de Bearne, y solicitó de ella
riño y afecto, manifestándole que humildemente el perdon de aquel des
deseaba verle y que en breve lo graciado, y ella, volviéndose al minis
llamaría para ayudarse de sus con tro español, que unia sus ruegos á los
sejos. del delincuente, lo dejó enteramente
Contínuos eran los peligros que ro á su arbitrio. Entonces Antonio Perez,
deaban á Antonio Perez; se prodigaba dando oidos en su corazon á los movi
el oro á manos llenas para hallar un mientos de piedad, influyó por aquel
asesino, porque Felipe II estaba cada miserable hasta que fué puesto en li
dia mas sentido de que se hubiese es bertad.
capado y con él los grandes secretos El haber salido mal estas dos ten
que intentaba destruir á todo trance. tativas de muerte, no bastó á que
Mientras permaneció en Pau Antonio desistiese de sus proyectos Felipe II.
Perez, valiéronse de una señora, á Mas adelante veremos renovarse las
quien se hizo el regalo de mil escudos tramas de asesinato contra su fugitivo
con el objeto de que se fingiese enamo ministro, á quien la providencia se
ANTONIO PEREZ. 205
-

complacia en hacer escapar de sus ase cas se refugiaron en la iglesia y se


chanzas. defendieron mientras tuvieron muni
En Pau se hallaba Antonio Perez, ciones; mas despues les fué forzoso
como hemos dicho, y varios emigrados rendirse, y los espedicionarios saquea
á consecuencia de los sucesos terribles ron las casas sin perdonar lugar profano
de Aragon. Alli, soñando como todos ni sagrado.
los emigrados de todas épocas, en lo La ciudad de Jaca en cuanto supo
fácil que es suscitar un levantamiento la entrada de los bearneses, tomó las
y una revolucion en el reino de que es armas, avisó á los ministros del rey
tán ausentes, concibieron el proyecto de aquel suceso y convocó á los pue
de apoderarse de Aragon y sublevar á blos de su distrito para la defensa co
Cataluña. Antonio Perez fué el alma mun del reino.
de estos proyectos, que hizo aprobar á La de Huesca recibió la noticia á
la princesa Catalina, prometiéndola, media noche, é inmediatamente toca
no solamente que se unirian á él con ron á rebato las campanas de todas las
tra Felipe II el pueblo de Aragon y los iglesias, temiendo que un gran ejército
montañeses, sino tambien los moriscos, francés hubiese invadido el reino. Ar
exasperados por las persecuciones que maron desde luego trescientos arcabu
en varios puntos del reino sufrian. ceros, que se dirigieron hácia la villa
Acordóse reunir seiscientos sol de Biescas, y hasta los clérigos y los
dados bearneses en Oloron para for frailes, capitaneados por su obispo, sa
mar con los emigrados y aventureros lieron como si fuera una guerra de re
españoles un cuerpo de mil quinientos ligion; verdad es que los auxiliares de
hombres. Los señores aragoneses emi los emigrados eran hugonotes.
grados debian ponerse al frente de El 22 de febrero de 1592, presentó
aquella division espedicionaria para se ante los invasores la vanguardia del
sublevar el reino y ocupar los lugares ejército real que mandaban los capita
fuertes donde se organizase el levan nes don Francisco de Velasco y don
tamiento. Martin Dávalos de Padilla. No espera
Seis mil soldados franceses debian ban don Diego de Heredia y don Juan
aprestarse á seguir sus huellas, si no de Lanuza semejante llegada; mas no
se malograba la espedicion. Una dama desanimándose, presentaron inmedia
española, doña Agueda de Arbizu, que tamente los espedicionarios la batalla
se hallaba al servicio de la reina Cata— á las tropas reales, que los rechazaron
lina, traspiró el proyecto, lo participó con el mayor ímpetu y los destrozaron.
á su padre don Sebastian, el que lo Viéronse obligados, abandonados de
puso en conocimiento del virey de los franceses que inmediatamente hu
Navarra, don Martin de Córdoba, el yeron, y á pesar de los prodigios de va
que mandó un correo ganando horas al lor que hicieron los caballeros aragone
general Vargas. ses, dejando mas de doscientos hom
La espedicion de los emigrados en bres en el campo de batalla, á huir del
tró en Aragon por Tena, atravesó el es reino y salir por el mismo valle por
trecho que se llama de Santa Elena, y donde habian entrado. Muchos de ellos
acometió á la villa de Biescas. Compo lograron salvarse por los despeñaderos
níanse estas fuerzas de mil cuatrocien de las montañas; don Diego de Heredia
tos hombres, teniendo á su frente á y don Francisco de Ayerve cayeron pri
don Diego de Heredia, don Martin de sioneros; don Martin de Lanuza, Gil
Lanuza, don Francisco de Ayerve, Ma de Mesa y Manuel don Lope, pudieron
nuel don Lope y Gil de Mesa, perso— entrar en Francia despues de grandes
nas todas que ya conocen nuestros lec penalidades y de aquel cruel desenga
tores, y que tanto habian figurado en ño. Fué tal el terror que se difundió en
los sucesos de Zaragoza. Pau al saber la derrota de los emigra
Llegaron sin obstáculo alguno has dos y la matanza que habian hecho las
ta Biescas, si bien asombrados del si tropas reales en los auxiliares, á quie
lencio y la quietud con que los recibia nes no se dió cuartel, que se cerraron
el pais, que no tomaba parte en sus las puertas de la ciudad, y la princesa
movimientos. Los habitantes de Bies Catalina se dispuso á meterse en una
206 CAUSAS CELEDRES.

Rº fuerte temiendo que don Alonso fortaleza de San Torcaz, donde los comi
argas pasase la frontera é invadiese sarios del rey le mandaron dar tor—
la Francia. Este es el último hecho con mento. Su salud débil no pudo resistir
que se terminó la revuelta política de al dolor, declaró cuanto quisieron sus
Aragon. jueces, y denunció á cuantas personas
Desplegóse entonces una severidad le indicaron, esplotando su debilidad.
cruel, y sin ejemplo. Los inquisidores Fué llevado á Zaragoza para figurar
prendian so color de causas de fé á en el tremendo ejemplar que se pro
cuantos habian auxiliado á Antonio Pe ponia dar el rey en aquella ciudad que
rez. Molina de Medrano que habia ve aterró á la España y á la Europa.
nido á Madrid en 26 de noviembre, en El dia 19 de octubre de 1592 fué el
un informe que dió al Inquisidor gene designado para la ejecucion de los reos
ral, denunció nominalmente centena juzgados por la autoridad real, y el
res de personas clasificándolas en las siguiente 20, para la celebracion de un
categorías de caballeros, de clérigos y auto de fé, en que debian perecer
ministros del Santo Oficio, y de labra cuantos se habian opuesto á la Inqui
dores y de gente comun. Las autorida sicion.
des reales prendian tambien á cuantos Amaneció el dia 19, dia de luto y
habian tomado la menor parte en el de terror, y cuya memoria no se bor
movimiento popular. rará jamás de los hijos de Aragon.
Desterráronse además muchos ma En medio del Mercado se habia le
gistrados y personas ilustres y del vantado un cadalso para un auto de
pueblo, de dentro y fuera de Zaragoza. fé, y mas abajo se habia construido
A Teruel fué enviado un ministro de un tablado cubierto de luto. A las tres
la audiencia de Valencia con comision de la tarde sacaron de la cárcel de
de poner presos y castigar á los que los manifestados, á los condenados
habian tomado parte en el movimiento por la audiencia de Aragon, que eran,
popular, siendo ahorcados los mas cul primero Pedro Fuertes, pelaire, el que
pables, y los demás condenados á gale habia traido de Pedrola y de Epila la
ras. El cuchillo del verdugo iba á der artillería para el movimiento popular,
ribar las cabezas de los nobles, y la pi al que sacaron en un seron arrastrado
queta del albañil iba á deshacer las por dos mulas y vestido de luto; de
moradas en que habian vivido y eran tras de él salieron en mulas con gual
el adorno de la ciudad de Zaragoza, drapas y con sotanas largas de luto
que presentaba el aspecto de un pue Dionisio Perez y Francisco de Ayerve,
blo en ruinas. y despues don Diego de Heredia, ba
El conde de Aranda y el duque de ron de Bárboles, estos dos últimos co
Villahermosa, aunque habian sido lle gidos prisioneros en la invasion que
vados presos á Castilla fueron juzgados hicieron los emigrados de Pau, y don
en la audiencia de Aragon, pero mien Juan de Luna, señor de Purroy, en mu
tras se siguió su causa murieron en sus las tambien con gualdrapas, vestidos
prisiones, pero justificaron tan bien su con sotanas y ferreruelos de luto, sin
conducta destruyendo los cargos que sombrero, todos llenos de resigna
habia contra ellos, y sobre todo había cion y contricion cristiana.
se mientras disipado el ódio que el rey Condujéronlos por las calles sin
pudiera tenerles, que fueron declara guardias y dando diferentes pregones,
dos inocentes á la muerte de Felipe II. declarando como al primero mandaba
Don Juan de Luna, que habia logra S. M. arrastrar, ahogar y hacer cortar
do fugarse, y se hallaba oculto en Tu la cabeza, á los dos siguientes degollar,
dela por , no haber podido salvar la y á los otros dos cortar, la cabeza, y
frontera de Francia, fué delatado á los ponerla con letreros en diferentes par
ministros y justicia real por un clérigo tes juntamente con la de don Francisco
llamado Pedro Quintana, natural de de Ayerve y confiscarles todos sus bie
Sangüesa, que habia sido criado suyo, nes y derribarles las casas. -

que ingrato á los beneficios que de él Llegados al cadalso, lleno de valor


¿ recibido lo entregó con la ma y resignacion con voz grave y mesu
yor perfidia é infamia. Fué levado á la rada, don Juan de Luna manifestó que
ANTÓNiO PEREZ. 207
-- --
-

moria por sus pecados y desobedien contra España y trataba de utilizarla,


cia, exortando á todos á que sirviesen habiéndole escrito en el mes de abril,
al rey y que le perdonasen. Tambien llamándole á su lado, la siguiente
quiso hablar algunas palabras don Die Carta:
go de Heredia, pero no pudo, porque
estaba como fuera de sí. Don Juan de «Deseo infinitamente veros y ha
Luna se desabrochó el cuello y los pu blaros de negocios importantes tocan
ños y estendió las manos al verdugo tes á mi servicio: escribo al presente
¿? que se las atase, estando muy so á la Reina de Inglaterra, Madama, mi
re sí y ofreciendo á Dios todo aquel buena hermana, y á mi primo el conde
trabajo en que se hallaba. Inmediata de Essex para rogarla os permita hacer
mente el verdugo le cortó la cabeza, la este viage en el que estoy seguro de
cogió en sus manos y la presentó al que no tendrá dificultad. Escribo tam
pueblo. bien al comendador de Chartres que
Lo mismo hizo con don Diego de os reciba á vuestro paso por alli, y os
Heredia, pero éste fué degollado por proporcione los medios y seguridad
detras, porque asi lo habia prevenido el para que vengais á encontrarme: de
rey, pero fué tal la torpeza del verdu modo que solo dependerá de vos el
go en esta ejecucion, que le dió mas estar pronto á mi lado, cual se requie
de veinte golpes, de manera que se re para bien de mi servicio: en el en
cayó la venda que le cubria los ojos, tretanto ruego á Dios, señor Antonio
el cuerpo, vivo, palpitante, sal Perez, que os tenga en su santa y dig
tó del tablado con la cabeza sin acabar na guarda.—Escrita en Fontainebleau
de desprenderse del cuello, agitado el dia último de abril de 1565. Firmado,
con horribles convulsiones. Los otros HENRIQUE.» -

dos fueron degollados, y el pelaire su


frió la pena de garrote, despues de lo Perez habia acudido á su llama
cual fué descuartizado. miento; habia sido recibido en Saumur
Todos los cuerpos, asi los de los con las mayores muestras de cordiali
nobles como los de los plebeyos, per dad y de interés. Enrique IV le habia
manecieron tendidos en el cadalso por ofrecido con instancia una crecida pen
espacio de una hora. Las cabezas de sion que rehusó Antonio Perez, porque
don Juan de Luna, don Diego de Here confiaba en que con las relaciones que
dia y don Francisco de Ayerve fueron tenia aun en Madrid podria volver to
colocadas con sus letreros, la primera davía alli, cuando si tomaba abierta
en la puerta de la Diputacion, la del mente servicio con el monarca francés
segundo en el Puente de la ciudad y la se cerraba para siempre las puertas
tercera en la Cárcel Nueva sin letrero de su patria.
alguno, y la de pelaire clavada en la Mandóle Enrique IV pasar, para
del Portillo, por donde habia entrado afirmar la alianza con Francia, á Ingla
con su artillería. terra, y le dió cartas de recomenda
Fueron condenados al mismo su cion para la reina Isabel, si bien exi
¿ aunque sin poderse verificar por giéndole la palabra de que volveria á
aberse ausentado con tiempo, don Sul Set"Vl Cl0.
Martin de Lanuza, señor de Biescas, La Inquisicion continuó la causa
que acompañó á Antonio Perez, don que habia seguido á Antonio Perez, y
Miguel de Gurrea, primo del duque de que habia sido el principio de las gran
Villahermosa, don Antonio Ferriz de des calamidades de Aragon. El 5 de
Lizana, don Juan de Aragon, cuñados febrero de 1592 lo declaró fugitivo, y
del conde de Sástago, don Martin Sié— fijó edictos en la iglesia metropolitana,
tamo y otros varios caballeros. emplazándole para que compareciese
Habíase salvado Antonio Perez, y dentro del término de treinta dias. La
esta idea atormentaba de contínuo al brevedad del término revelaba ya la
rey, y muy particularmente á la In parcialidad de los jueces. Un familiar
quisicion. No solamente se habia sal de la Inquisicion, aragonés, acusó á Pe
vado, sino que Enrique IV habia visto rez de que descendia de un judío que
en. Antonio Perez un arma poderosa mado por la Inquisicion, porque el 13
208 CAUSAS CELEBRES,

de noviembre de 1489 habia sido, se- y concluyó para sentencia definitiva.


gun resultaba de los archivos de la In Reunidos el 7 de setiembre los in
uisicion, que para este objeto cuida quisidores con el ordinario diocesano,
osamente se registraron, relajado y varios teólogos, consultores y juristas,
uemado públicamente un Juan Perez y entre ellos el regente de la audien
e Fariza, vecino de Ariza; pero este cia don Urbano Jimenez de Aragües,
no era ascendiente de Antonio Perez. que tan principal papel han visto
Sin embargo, queria el tribunal que tal nuestros lectores representar en los
apareciese, y examinaron en vano has sucesos de Aragon, siendo él el que ha
ta catorce ancianos, vecinos honrados bia promovido la acusacion á la In
de Monreal que depusieron contestes quisicion contra Antonio Perez, pro
sobre la diversidad de las familias. nunciaron el 20 de octubre sentencia
Burlados en su objeto mandaron definitiva previa la aprobacion del con
procederá otra informacion en que sejo supremo de la Inquisicion, la cual
amañaron los testigos, y encontraron trascribimos porque ella contiene el
tres, de quince años el uno, familiar sumario de las diversas y ridículas acu
del Santo Oficio el otro, y sin saber saciones que se le hicieron.
nada el tercero; pero tampoco pudie
ron hacer nada. Visto por nos los inquisidores con
No desmayaron por eso, procedióse tra la heretica pravedad é apostasia en
á tercera informacion en la que llegó el reino de Aragon con la ciudad y
el escándalo hasta decir uno de los obispado de Lérida, por auctoridad
tres testigos que depusieron en ella, apostólica, juntamente con el ordina
que habia nacido en 1512, que habia rio del arzobispado de Zaragoza, un
conocido al Juan Perez quemado en proceso de pleito é causa criminal que
1 488, es decir, veinte y cuatro años ante nos ha pendido y pende entre
antes de que él hubiera nacido. Los partes, de la una el promotor fiscal de
otros dos le hacian descender de oidas
la fee, actor acusante, y de la otra An
de la hija de un cura, Anton Perez, tonio Perez ausente fugitivo, secreta
hermano de Juana, la que casó con rio que fué del Rey nuestro Señor, re
Diego Martinez, de cuyo matrimonio sidente en esta ciudad, cuya estatua
nació Gonzalo Perez, padre de An está presente:
tonio.
El fiscal de la Inquisicion con cíni CIIIRISTI NOMINI INVOCATO.

ca impudencia, apoyado en estos tes


timonios vagos y evidentemente falsos, Fallamos, autentos los autos y méri
arrancados á personas comunes y des tos del dicho proceso que el dicho pro—
preciables, procedió á formular la acu motor fiscal probo bien y cumplida
sacion compuesta de cuarenta y tres mente su acusacion, segun y como
capítulos, acusándole de descendiente probar le convino: en consecuencia de
de judíos, de herege, y hasta fundado lo cual debemos declarar y declaramos
en la única deposicion de uno que ha al dicho Antonio Perez por convicto de
bia sido criado suyo, de sodomía. hereje, y por ello haber caido é incur
Agregáronse á las acusaciones an rido en sentencia de excomunion ma
teriores de la Inquisicion los folletos yor y estar della ligado, y en confisca
que habia publicado durante su estan cion y perdimiento de todos sus bie
cia en Pau; y reunidos el 13 de agosto nes, los cuales mandamos aplicar y apli
los calificadores para censurar las pro camos á la camara y fisco de S. M. y á
posiciones notadas y las impresas en su receptor en su nombre, desde el dia
Pau, graduaron diez y seis de ellas de y tiempo que comenzó á cometer los
temerarias y erróneas, algunas de blas dichos delictos de la herejía, cuya decla
femas, y opinaron que Antonio Perez era racion en nos reservamos. Y relajamos
sospechoso con sospecha vehementísi la persona del dicho Antonio Perez, si
ma y violentísima de heregía. pudiere ser habido, á la justicia y bra
Pidió el fiscal dos dias despues que zo seglar, para que en él sea ejecutada
se declarase contumaz por no haber la pena que de derecho en tal caso se
comparecido á responder á los cargos; requiere. Y porque al presente la per
ANTONIO PEREZ. 209
-

sona del dicho Antonio Perez ausente ceptadores de hereges, á ejecucion de


no puede ser habida, mandamos que las dichas penas y de las otras por de
en su lugar sea sacada al auto una es recho estatuidas y ordenadas; y á la
tátua que la presente con coroza de persona ó personas que le prendieren
condenado, y con un sanbenito que y antes nos le trujere, le hacemos gracia
tenga de una parte las insignias y fi y merced de todos los bienes y cosas
gura de condenado, y de la otra un le que consigo llevare, y le concedemos las
trero con su nombre: la cual estátua indulgencias, gracias y perdones que
esté presente al tiempo que esta nues por los Sumos Pontífices para semejan
tra sentencia se leyere, y aquella sea tes casos han sido concedidas. Y por
entregada á la justicia y brazo seglar, esta nuestra sentencia definitiva juz
acabada de leer la dicha sentencia, gando ansí lo pronunciamos y manda
para que la mande quemar é incinerar. mos en estos escriptos y por ellos pro
Y declaramos por inhábiles é incapaces tribunali sedentes.—El licenciado Pe
á los hijos é hijas del dicho Antonio dro de Zamora.—El licenciado Velarde
Perez y á sus nietos por línea mascu de la Concha.—El doctor Juan Moriz de
lina, para poder haber, tener y poseer Salazar.—El Doctor Pedro Reves.
dignidad, beneficios y oficios, asi ecle
siásticos como seglares que sean pú Era esta sentencia lo único que fal
blicos ó de honra, y no poder traer so taba para que pudiese la Inquisicion
bre sí ni sus personas oro, plata, ni verificar un auto de fé, y deshacerse
perlas, piedras preciosa, corales, sedas, en él de cuantos habian tomado parte
chamelote, paño fino, ni andar á caba no contra la fé, sino contra el tribunal
llo, ni traer armas, ni ejercer ni usar de la Inquisicion favoreciendo el movi
de las cosas arbitrarias á los semejan miento popular por el que habian sido
tes inhábiles prohibidas, asi por dere arrancados de sus cárceles Antonio Pe
cho comun como por leyes y pregmáti rez y su secretario Mayorin.
cas de estos reinos é instrucciones del Asi es que el dia 20 de octubre, el
Santo Oficio. Y porque seria de poco siguiente al en que habia visto horro
fruto pronunciar sentencias si no se rizada Zaragoza morir en el cadalso á
mandasen traer á debida ejecucion, don Juan de Lanuza, don Diego Fernan
exhortamos y amonestamos, y so pena dez de Heredia, Francisco de Ayerve,
de excomunion mayor latae sentencioe, Dionisio Perez, y el gefe de los pelai
y de cada quinientos ducados de oro res, presenció el auto de fé en el que
para gastos extraordinarios deste San fueron sentenciadas mas de ochenta
to Oficio y otras penas á nuestro arbi personas, treinta y nueve de ellas con
trio reservadas, mandamos á todos y denadas á muerte, toda gente plebeya
cualesquier jueces y oficiales, asi ecle y de los que el dia 24 de setiembre
siásticos como seglares, y otras cual habian tomado parte en la libertad de
uier personas de cualquier estado, Antonio Perez. Solo habia entre ellos
¿ ó condicion que sean, que al
dicho Antonio Perez convencido de he
notable un hidalgo rico de Tauste,
grande amigo de Antonio Perez.
rege fugitivo condenado, donde quier Tambien se presentó en este auto
que estuviere y pudiere ser habido, de fé á Miguel don Lope, hermano de
aunque sea en iglesia, monesterio ó otro Manuel don Lope, que habia logrado
s lugar sagrado y cuanto quier previle salvarse en Francia, y en cuya casa,
giado, le sigan y prendan, y en buena y que llamaban la casa de la libertad, se
fiel custodia traigan y hagan traerante habian tratado casi todos los prelimi
nos para lo que damos auctoridad y nares de la revuelta de Aragon. Habia
- poder cumplido con apercibimiento que sido Miguel don Lope capitan de Sici
no lo haciendo, mandaremos proceder lia, hombre señalado por su valor, por
se procederá contra los que le ha su hermosa figura, y gentil donaire.
laren, tractaren , ó comunicaren, y Salió al auto de fé, cual pudiera salir á
contra los que pudiéndole prender no un torneo: llevaba jubon y calzones de
le prendieren, ú en algo de lo sobre di tela de oro, y un coleto de cordoban
cho fueren negligentes ó culpados, co blanco con pasamanos de oro, con una
mo contra fautores, defensores, y re coroza pequeña y un cirio en las ma
27
210 CAUSAS CELEBRES.
-e

nos. Creian las gentes que hubiera lle-mal sonantes, aficion á Enrique IV rey
vado el sanbenito de los relajados, es de Francia, é indicios gravísimos de
decir, de los condenados á muerte, sodomía.
empero eran tales sus relaciones, y tal Las nueve de la noche serian, cuan
el interés que supo inspirar aun á los do se terminó la lectura de las causas
jueces del Santo Oficio, que solo fué del auto de fé. Al resplandor de las ha
condenado á galeras por toda su vida. chas encendidas, ante un concurso
Muchos hombres honrados de la numeroso y asombrado, le entregaron
ciudad salieron sin capas, desceñidos, los reos y la estátua de Perez á Micer
con cirios, y los que habian sido con: Urbano Jimenez de Aragües, regente
ä. por resistencia á la lnquisicion de la audiencia, el que se dió por en
y por sedicion iban como estos sin co-tregado de la estátua y de los reos, los
roza ni sanbenito, escepto Miguel don cuales despues de haber recibido gar—
Lope. - rote primero, fueron arrojados á las lla
Los treinta y nueve condenados á mas, haciéndose lo mismo con la está
muerte ó relajados, llevaban sus san-tua que representaba la persona de
benitos con su nombre y no coroza. El Antonio Perez, legando asi su nombre
sanbenito era un escapulario grande y el de toda su descendencia á perpétua
de color amarillo con que se cubria al infamia.
reo herege, ó sospechoso: llevaba pin- Despues que la audiencia y la In
tado en él llamas y diablos; y la coroza quisicion habia hecho correr largamen
era de lo mismo en la cabeza. te la sangre, y con grande aparato se
Caminaban detrás de los relajados habian hecho estas ejecuciones, ce
dos sayones con la estátua de Antonio diendo á las instancias reiteradas del
Perez, cubierta con el sanbenito con marqués de Lombay y del general don
llamas de fuego, y este letrero: Alonso de Vargas, envió Felipe II á
Zaragoza en 24 de diciembre de aquel
ANToNo PEREz, SECRETARIo QUE FUE mismo año (1582) un perdon general,
DEL REy N. S., NATURAL DE MoNREAL DE en el que habia muchísimas escepcio
ARIzA, y RESIDENTE EN ZARAGozA, PoR HE-nes; entre otras las de ciento diez y
REGE coNVENCIDo FUGITIvo, RELAJADo. nueve personas nominalmente esclui
das de las clases de hidalgos, aboga
Leyéronse los procesos públicamen- dos y del pueblo, siendo tambien es
te en la plaza, sentado el tribunal de ¿idos los eclesiásticos, los frailes, los
la Inquisicion en un magnífico estrado. militares que hubiesen tomado parte
Todos los procesos, á escepcion de los en el movimiento popular, y los letra
de algunos moriscos y de una muger dos que opinaron por la resistencia á
casada con dos maridos, eran por ser la entrada del ejército como contra
amigos y fautores de Antonio Perez, y fuero: en una palabra, era mas la es
por haberle sacado de la Inquisicion, ó cepcion que el número de los perdo
por haber tratado de hacer resistencia nados, dejando ademas este indulto
al ejército que habia entrado en Ara-general, muy parecido al que dió Cár
gon, condenándolos como impedidores los V despues de sometidas las comu
del libre y recto ejercicio del Santo nidades de Castilla, la puerta ámplia
Oficio. para poder perseguir y calumniar á
Desde las ocho de la mañana que cualquiera.
habia empezado el auto se estuvieron Habian quedado para siempre im
leyendo causas. Echábase la noche en-posibilitados de moverse los amigos de
cima. Entonces se hizo que, atrope- los fueros. -

llando y leyendo sumariamente algu- Trató Felipe II de dar cierto aspec


nos procesos, se leyese por un secre-to legal á la situacion. Convocó córtes
tario, que hasta entonces nada habia en Tarazona para revisar las institu
leido, en alta voz que todos oyeron muy ciones aragonesas, y abriéronse estas
bien, el proceso de Antonio Perez. córtes contra la costumbre sin la pre
Contenia este, como han visto nues- sencia del monarca en junio de 1592
tros lectores en la sentencia, una por-bajo la presidencia del arzobispo de
cion de espresiones y proposiciones Zaragoza, don Andrés de Bobadilla.
ANTONIO PEREZ, 2
== -

Mas tarde, en setiembre de aquel res que habia debido á Gonzalo Perez,
mismo año, vino el rey á las córtes que por su mediacion y solicitud no
donde se juró al príncipe don Felipe ¿ sido llevada á Castilla como
or heredero del trono, recibió de aque pretendió entonces su hermana la rei
las córtes el donativo mas cuantioso na María.
ue habian jamás otorgado las córtes La enemistad de Felipe II, la acer
¿ aquel reino, y se modificaron los ba persecucion que hacia á Perez, eran
fueros mas importantes de Aragon, en tambien títulos de recomendacion pa
sanchándose de una manera prodigio ra la reina Isabel, rencorosa y altiva,
sa las facultades del monarca. Se con— que aborrecia al soberano español con
servó en el nombre la alta dignidad del toda su alma. La lucha se habia esta
Justicia mayor del reino, pero decre blecido entre el pabellon español y el
tando que fuese de nombramiento y pabellon británico en los mares, y la
provision del rey y amovible á su vo suerte dió la victoria á Inglaterra, en
luntad. cuyo favor estuvieron los elementos,
Asi, lo que era antes una verdade— sepultándose las flotas españolas en
ra é importante institucion se convir las olas, vencidas, no por el valor bri
tió en un simple empleado del rey. tánico, sino por el furor de los ele
Aqui rigurosamente termina el cé— mentOS.
lebre proceso de Antonio Perez que, Antonio Perez fué recibido en In
como han visto nuestros lectores, ha glaterra de la manera mas afectuosa y
bia durado doce años y presentado tan entusiasta por todos los personages
diversas fases; empero el interés que principales de la córte, y contrajo ín
inspira el protagonista y el deseo con tima amistad con el conde Essex, fa
que suponemos á muestros lectores de vorito y consejero de la reina, y esta
conocer el fin de este notable persona le señaló una pension de treinta li
e, á quien hemos visto en la cumbre bras. -

el poder de las predilecciones Durante su mansion en Lóndres


y confianza de Felipe II, y despues en vivió Perez en medio de la comodidad
el colmo de la miseria y del abatimien de los placeres, era el hombre de la
to, objeto incansable de sus iras, nos moda; disputábanse su trato y sus vi
mueve á dar una ligera reseña de los sitas las familias mas poderosas, y la
sucesos todavía azarosos y varios por misma reina le convidaba frecuente
ue tuvo que pasar despues de su sa mente á su palacio. Antonio Perez di
lida de España y de su suplicio en es vidia su tiempo entre los placeres y en
tátua en la plaza de Zaragoza. escribir sus Relaciones bajo el nombre
Antonio Perez, resentido contra el supuesto de Rafael Peregrino; escrito
monarca español, se habia colocado al que hizo gran sensacion en el mundo,
lado de Enrique IV, su enemigo, que arrebatándose los ejemplares en París,
en breve debia declararle la guerra. Lóndres y Roma, publicándose diver
Pasó por su mandado á Inglaterra con sas traducciones, estractos y coleccio
cartas de recomendacion para la reina nes de sus sentencias, que se vendian
Isabel, la que le recibió afable y cari públicamente por las calles bajo el
ñosa porque tenia antiguos deberes de nombre de las Sentencias doradas de
gratitud que recordar, porque cuando Antonio Perez.
en 1554 Felipe II habia sido rey de In Veia Felipe II con disgusto y repu
glaterra por su matrimonio con la reina taba por un insulto los honores que se
católica María habia llevado consigo dispensaban á su fugitivo ministro y
á Gonzalo Perez por único secretario. su enemigo declarado. Trató, pues, de
Gonzalo Perez habia sido el solo protec desembarazarse de él.
tor que habia tenido la princesa Isabel Un dia recibió Antonio Perez en
cuando se hallaba presa; y despues al Lóndres un aviso de la reina para que
subir al trono por la muerte de su her fuese á palacio. El conde de Fuentes,
mana la reina María, que no habia de gobernador de los Paises Bajos, habia
jado sucesion de su matrimonio con ganado á fuerza de oro á dos irlande
Felipe II, si bien odiaba el nombre es— ses para que matasen á Antonio Perez.
pañol, recordaba con gratitud los favo Fueron presos y puestos al tormento.
212 CAUSAS CELEBRES.
==

Sus declaraciones, aunque contradic— Mateo Aguirre, y venian con encargo


torias, y algunos papeles que se les co de matar á cualquier costa á Antonio
gieron demostraron la certidumbre del Perez. Tres veces se presentó don Ro
crímen que proyectaban y fueron sen drigo en su casa, y tres veces le nega
tenciados á muerte, ejecutados y colo ron la entrada los suizos que custodia
cadas sus cabezas en garfios de hierro ban la casa del ministro español, por—
sobre una de las puertas de la ciudad que para su seguridad Enrique IV le
de Lóndres (1594). habia concedido una guardia á peticion
Treinta meses llevaba Antonio Pe suya. •

rez en una vida tranquila y feliz, si Hízose sospechosa tanta solicitud é


felicidad puede haber para los emigra insistencia, pusiéronle preso á la ter
dos lejos de su patria y de su familia.cera ver que se presentó, y le encon
La de Perez permanecia siempre en la traron dos pistolas cargadas con dos
mas estrecha y dura prision. balas cubiertas cera. A las puertas de
Habíase declarado formalmente la París, en el campo, le estaban espe
guerra entre Enrique IV y Felipe II, y rando el criado y el fraile con caba
el monarca francés quiso tener á su llos y víveres para poder caminar sin
lado por considerarle muy útil á Anto detenerse. Puesto á tormento don Ro
nio Perez, y mandó para que viniese á drigo, confesó que habia venido á ma
don Martin de Lanuza, que se hallaba tar á Antonio Perez, de órden de Fe
emigrado en París. lipe II. Cogióse solo al criado, porque
Resistióse Perez algun tanto, pero el fraile, mas listo, pudo escapar, y
tuvo que ceder habiendo recibido an dos meses despues fueron ajusticiados
tes de Enrique IV una pension de cua en la plaza de Grève el 12 de enero de
tro mil escuelos que habia vacado por 1596 el asesino y su cómplice.
fallecimiento del prior don Antonio Esta fué la última tentativa em
Ocrato, que se habia titulado rey de prendida contra la vida de Antonio,
Portugal y habia disputado la corona pero el temor y la agitacion habian
por algun tiempo, y que fué á morir entrado en su alma, y por donde quie
emigrado, y víctima tambien del rigor ra veia amagar á su pecho el puñal de
de Felipe II en París. los asesinos de Felipe II.
Valióse Enrique IV, que recibió á En la primavera de 596 envió En
Antonio Perez con el mayor esmero rique IV segunda vez á Inglaterra á
dándole un magnífico alojamiento en Antonio Perez para que activase una
París, de los conocimientos y relacio alianza ofensiva y defensiva entre am
mes de este ministro y de su influen bas naciones; pero la suerte habia cam
cia con el conde de Essex, para hacer biado, no encontró ya en el conde de
que la Inglaterra se uniese á la Fran Essex el amigo que habia tenido du
cia en la guerra contra Felipe II. rante su primera permanencia en In
Asi Antonio Perez, despues de ha glaterra. Habíase resentido de que
ber sido la causa dé la ruina de la li prestase sus servicios con preferencia
bertad de su pais, armaba el brazo de á la Francia.
los estrangeros contra él. Evitó el conde de Essex cuidadosa
Las tres tentativas frustradas de mente el verlo, la reina le recibia,
asesinato contra Antonio Perez, á quien pero friamente, y el tratado se verifi
visiblemente protegia la suerte contra có, pero sin que hubiese tenido ninguna
el odio de Felipe II, no bastaron para parte en él Antonio Perez.
que este implacable rey desistiese de Continuaba sin embargo Antonio Pe
sus propósitos. rez siendo el confidente de Enrique IV,
Un dia se presentó en París de re que le dispensaba toda su proteccion,
pente, cuando mas tranquilo se halla y se aprovechaba de sus servicios.
ba Perez, don Rodrigo de Mur, señor Aun cuando Antonio Perez habia
de la Pinilla, que ya habia querido, trabajado mucho en estrechar la alian
cuando su fuga de Zaragoza, ir á pren za de la Francia y la Inglaterra contra
derle en el castillo de Biescas. Lleva la España, el curso de los sucesos oca
ba consigo uno de sus criados y le sionó la paz de Vervins , en mayo
acompañaba un fraile vizcaino llamado de 1598, por que terminó la antigua
ANTONIO PEREZ. 213
=

contienda entre Enrique IV y Felipe II. reemplazado por el conde de Miranda. A*.
En vano pidió Enrique IV que fuese Cuando Felipe IIl marchó á Valen
comprendido en la paz Antonio Perez. cia á celebrar sus bodas el año de 1599,
Resistióse constantemente el rey, y mandó poner en libertad á doña Juana
nunca pudo verificarse esto. Coello, del castillo en que se hallaba
En 13 de setiembre de este mismo presa, si bien sus hijos permanecieron
año de 1598, murió Felipe II, el ene en prision. -

migo implacable de Antonio Perez. Al llegar á Zaragoza Felipe III, no


Cuando Felipe II, despues de una ago quiso entrar en ella sin que antes se
nía de mas de dos meses, en que con hubiesen quitado las cabezas que esta
su cuerpo todo convertido en una lla ban espuestas en las puertas y sitios pú
ga, sentia escapársele lentamente el blicos de la ciudad, de los que habian
alma, vió las cosas bajo el punto ver sido partidarios de Antonio Perez.
dadero de vista que se miran en el Un año despues de haber puesto en
umbral de la muerte, perdonó á va libertad á doña Juana Coello, pusieron
rios de sus enemigos, levantó muchos tambien á sus siete hijos, que habian
destierros, y cuentan que sacó un pa estado nueve años en la cárcel.
¿ que conservaba debajo de la ca— Deseaba Antonio Perez volver ar
ecera de la cama, en que entre otras dientemente á España, porque el vol
cosas se leia: ver á la patria es el sueño del emigra
do, por próspera y favorable que sea
«A la muger de Antonio Perez, con su fortuna en el pais estrangero. Aña
que se meta recogida en un monaste díase á esto, que Antonio Perez comen
rio, la podrán soltar y volverla la ha zaba á hacerse inútil y sospechoso en
cienda que la toque, y sus hijos here— París, y que su pension esperimentaba
den la parte de ella.» algunos retrasos en su pago. Veíase
además alli solo, porque al concederse
Fué todo cuanto pudo recabarse la libertad á su muger, y á sus hijos
en aquella hora de perdon y de in se les habia impuesto por condicion
dulgencia del inflexible Felipe II, que precisa y necesaria, que no habian de
resistió tenazmente las súplicas que en marcharse de España.
favor del ministro proscripto le dirigia En vano todos los dias dirigia sus
su célebre predicador Fr. Hernando peticiones á Felipe III, para volver á
del Castillo. su pais: en vano comisionó Antonio Pe
Autores hay que refieren que en rez al padre Crespo, á quien habia vis
poder de don Cristóbal de Mora, uno to por casualidad en París, para que
de los ministros de Felipe II, quedó arreglase sus negocios con el jesuita
una copia de un papel de Advertimien Renjifo, confesor entonces del duque
tos politicos que hizo escribir para su de Feria; fueron inútiles sus ges
hijo, Felipe, el soberano moribundo: y tiones.
en que entre otras advertencias le en No bastaba obtener el perdon del rey,
cargaba, que jamás dejase volver á Es era preciso tambien conseguir el del
paña ni á Bélgica á Antonio Perez, pro Santo Oficio, y este no cedia. El conde
curando tenerlo apartado en algun rin— de Miranda, presidente del Consejo de
con de Italia. Castilla que favorecia á doña Juana, le
A Felipe II, habia sucedido Feli hizo entender que convendria que se
pe III. Antonio Perez en el tiempo de su separase del servicio del monarca fran
privanza, habia conservado muy bue cés, y Antonio Perez entonces siguien
nas relaciones con la familia del mar— do el consejo de este personage, se pre
qués de Denia duque de Lerma, minis sentó á Enrique IV su antiguo valedor,
tro del nuevo rey. á renunciar la pension de que gozaba.
Este monarca se habia portado con Resintióse el rey de este acto, y le
la mayor ingratitud con los ministros rogó que mirase bien lo que una vez
y favoritos de Felipe II. El presidente hacia, porque podia pesarle. Insistió
del Consejo de Castilla, Rodrigo Vaz sin embargo en ello; dejó su pension, y
quez de Arce, el inflexible juez de An abandonó á París, yendo á Lóndres con
tonio Perez, fué depuesto, desterrado, y objeto de hacer méritos con Felipe III,
214 CAUSAS CELEBRES.
==E

activando las negociaciones de paz que go lo que pudiera, con objeto de vivir
entonces se entablaban entre España y Juntos.
la Inglaterra. Pero el ministro de Estado En este estado de aislamiento, de
de Enrique IV Villeroy, sospechoso de miseria, vivió Antonio Perez escribien
la mision que llevaba, hizo escribir en do sin cesar al duque de Lerma, de
contra suya á los amigos que tenia en quien no recibia contestacion; y diri
Inglaterra, de modo que no fué admi giéndose á Fr. Francisco de Sosa, gene
tido en aquel pais, y tuvo que retirar ral de la órden de religiosos observan
se otra vez á Francia á esperar el cum tes, obispo de Canarias y consejero de
plimiento de sus esperanzas. Pero pa la Inquisicion, para que alcanzase un
saron los años, d aunque habia cam salvoconducto del Consejo de la Su
biado la política de Felipe III, no cam prema, hasta que pudiese presentarse
bió con respecto á él. al Santo Oficio sin temor de ser en
Tristísima fué entonces su situa tregado luego á la jurisdiccion real,
cion: tuvo que acogerse otra vez á la para sufrir la sentencia impuesta en
generosidad de Enrique IV, cuya pen Madrid. -

sion con tanta ligereza é imprudencia Habia conseguido ya del papa la


habia renunciado; pero como ya los co absolucion de las censuras en que ha
nocimientos de Antonio Perez no te bia incurrido, y licencia para tener
nian importancia, como la moda que oratorio en su casa, por que la debili
acoge y levanta caprichosa á los hom dad de las piernas no le permitia ya
bres pasa brevemente, no se le devol salir de ella. Su único consuelo ¿
vió su pension, y se vió en la tristí correspondencia con su muger y sus hi
sima necesidad de suplicar al rey de jos. Tuvo el sentimiento de perderá su
Francia y á sus ministros que le favo hija mayor, la bella Gregoria, sin tener
reciesen con alguna limosna mientras el consuelo de abrazarla. Este golpe
llegaba la resolucion de Felipe III. No sobre tantos otros acabó de abatir su
solo no se le devolvia la pension, sino ánimo. -

que tampoco se le permitia volverá su En 1611 dirigió al Consejo Supremo


patria. En vano puso por su intercesor de la Inquisicion, la peticion siguiente:
al embajador don Baltasar de Zúñiga,
cuando volvió á Madrid en 1606, pues MUY PODEROSO SEÑOR:
Zúñiga tornó á París sin el perdon que
deseaba. Lo mismo sucedió con don Ya tendra V. A. noticia de mis tra
Pedro de Toledo, que reemplazó en la bajos, y como el mayor á sido por el
embajada á Zúñiga. processo que se fulminó contra my en
En 1608 el ministro de Felipe II, el Santo Oficio de Zaragoza; y aunque
tenia que vivir en un arrabal de París el remedio consistia en presentarme
triste, desamparado de todos, lleno de para que mi verdad constasse, no ha
achaques y pobre. Mas de una vez tuvo sido possible por el peligro que mi vi
que recurrir á la caridad de sus ami da corria. Escribiendo esto al señor
os. En medio de sus disgustos, el año obispo de Canarias por averle conosci
e 60 tuvo el consuelo de ver asegu do en París y aver tenido nueva que
rada la subsistencia de su familia por era desse supremo Consejo, me respon
medio de una pension de ochocientos dió que era frívola la escusa que yo
ducados, que señaló á doña Juana Fe daba, porque si me presentaba, V.A.
lipe III. me daria salvoconducto de que acaba
Enrique IV fué asesinado en aquel do lo tocante al Santo Oficio me pon
mismo año en París; asi perdió su único dria seguro fuera del reyno; y visto esto
aunque débil apoyo, y la mas negra y que lo que mas convenia á mi con
melancolía se apoderó de su corazon. ciencia era presentarme en el tribunal
Contaba ya sesenta y un años, y en de Zaragoza, ó donde W. A. mas servi
aquella edad tan avanzada suspiraba ó do fuéra para que debajo de su protec
por volver á pasar los Pirineos para cion yo sea oido, me ofrezió á hazerlo,
poder morir en su patria, ó para que suplicando á V.A. se me conceda este
doña Juana de Coello su virtuosa espo salvoconducto, y que se me haga la
sa, pudiese escaparse trayendo consi merced que de justicia hubiere lugar,
ANTONO PEREZ 245
---.
- -
-"

en consideracion que no me pueda da Condestable de Castilla y su sobrino el


ñar la dilacion, pues yo no huí de las señor don Bartolomé de Zúñiga que
cárceles del Santo Oficio ni se puede me lo oyeron decir varias veces en los
articular contra my cosa que en des discursos largos que tuvieron conmi
obediencia dél ni se me ha notificado go, y los ofrecimientos que muchas é
cosa alguna; ni la estrajudicial noticia infinitas veces hice de retirarme á
que podia aver tenido me puede dañar donde me mandara mi rey á vivir y
pues no ha estado en mi mano la dicha morir como fiel y leal vasallo; y ahora
presentacion en muchos dias, sin gran últimamente por mano del propio Gil
peligro de mi vida; y assy lo pido y de Mesa y otro mi confidente, he escri
supplico á V. A. á quien nuestro Señor to cartas al supremo consejo de la In
guarde largos años.—De París, á 22 de quisicion, al ilustrísimo cardenal de
setiembre de 1611.—ANToNio PEREz. Toledo, inquisidor general, al obispo
de Canarias, y á la general Inquisicion
Antes de recibir la contestacion á es ofreciéndoles que me presentaria al
ta instancia cayó postrado en cama mor dicho Santo Oficio, para justificarme
talmente, desahuciado de los médicos. de la acusacion que en ella habia sido
Entre los pocos españoles refugia puesta; y para ello les pedí salvocon
dos que le asistieron en los últimos ducto, y que me presentaria donde me
momentos, se contaban sus amigos los fuese mandado y señalado, como el di
aragoneses, Gil de Mesa y Manuel don cho señor obispo podrá atestiguar. Y
Lope, que habian sido constantemente por ser esta la verdad digo que si mue
escluidos de los perdones que se ha ro en este reino y no en lugares de la
bian dado por Felipe III. Estos le asis corona ha sido á mas no poder, y por
tian con el mayor esmero y cariño. No la necesidad en que me veo de pro
se movia tampoco de su lado el reli veer de mi trabajo, esperando se me
gioso dominico fray Andrés Garin en disimule toda esta libertad, y supli
los últimos ocho dias de su enferme cando á mi rey, y señor natural que
dad, confesándole y preparándole á con su clemencia y piedad se acuerde
bien morir. de los servicios hechos por mi padre
Fija estaba en la imaginacion del á la magestad del suyo, y á la de su
infeliz moribundo la idea de la infamia abuelo, para que por ellos merezcan
que legaba á sus hijos; asi es que qui mi muger é hijos, huérfanos y desam
so en los últimos momentos dejar una parados que se les haga alguna mer
¿ que pudiera servir para la reha ced, y que estos afligidos y miserables
ilitacion de su memoria, y con tré no padezcan por haber acabado su pa
mula voz momentos antes de su muer dre en reinos estraños, en gracia, fa
te no pudiendo ya trazar su mano los vor y merced por fieles y leales vasa
renglones, dictó á su antiguo amigo Gil llos, á los cuales manda que vivan y
de Mesa el siguiente documento: mueran en la ley de tales.»
«Declaracion hecha por mí, Anto A las pocas horas de haber hecho
nio Perez, á la hora de mi muerte, la esta importantísima declaracion, fati
cual no pude escribir de mi mano por gado tal vez con el esfuerzo que ella le
hallarme fatigado en tal paso, y por ocasionó, con la emocion que debia
esto rogué á Gil de Mesa la escribiese causarle, habiéndose incorporado con
de la suya, en la forma y tenor de que gran pena para poder firmar, murió el
yo le fuese diciendo. 3 de noviembre de 1641 á la edad de
» Por el paso en que estoy, y por setenta y dos años, siendo sus últimas
la cuenta que vo y á dar á Dios, decla palabras el nombre de sus hijos au
ro y juro que he vivido y muero como SenteS. -

fiel y católico cristiano, y de esto hago Escasa concurrencia condujo su ca


á Dios testigo, y confieso á mi rey y dáver al claustro de los Celestinos,
señor natural, y á todas las coronas y donde fué depositado, y unos pocos
reinos que posee, que jamás fuí sino mendigos con hachas fué el acompaña
fiel servidor y vasallo suyo: de lo cual miento que condujo el féretro del po
podrán ser buenos testigos el señor deroso ministro de Felipe II, del hom
26 CAUSAS CELEBRES.

bre por cuya libertad se habia alzado Aragon, que abriese de nuevo el pro
y perdido las suyas todo un pueblo; ceso y oyese la defensa de Gonzalo Pe
del hombre á quien habian festejado rez en nombre de su padre. Dilataron
á porfía Enrique IV y la reina Isabel la causa todo lo posible los inquisido
de Inglaterra; del hombre cuyos con res de Aragon, que no querian que la
sejos habian ansiosamente escuchado revocacion de su sentencia fuese una
los políticos de ambas monarquías, y á acusacion de la ligereza con que ha—
uién iban á dar de limosna siete pies bian procedido por causas políticas en
e tierra para depositar su cuerpo, el primer juicio. Dieron al hijo en pro
que no debia descansar jamás en su banza el escrito, le señalaron un breve
patria. - término, y el abogado de pobres que
Muerto miserable en tierra estran le nombraron, porque aquella infeliz
gera Antonio Perez, llevó consigo al se familia se hallaba sin medios para sos
pulcro el desconsuelo de que pesaba tener un litigio costoso, lo hizo mal y
sobre sus tristes hijos la infamia de la de mala manera. Por último, presentó
sentencia de Zaragoza. su capítulo de defensa dividido en cien
- Veíase esta pobre familia separada to y un artículos con espresion de los
de la sociedad, cerradas las puertas de testigos al márgen de cada uno de
ella é imposiblitada de ocupar el pues ellos, que debian ser examinados. Pre
to y gerarquía al que podia llamarla un sentó tambien alegato de los escritos y
dia su noble nacimiento y esmerada papeles que debian compulsarse, y pi
educacion. La viuda de Antonio Perez dió se declarase nula la sentencia de 20
y su hijo mayor Gonzalo Perez, acudie de octubre de 1592 que produjo la
ron al consejo supremo de la Inquisi quema en estátua del desgraciado mi
cion, para rehabilitar la memoria de su nistro Antonio Perez.
esposo y de su padre. En 20 de febrero A esta defensa iban unidos cuatro
de 1611, se presentaron á aquel severo documentos principalísimos, que eran;
tribunal evidenciando por medio de un diploma de Cárlos V como rey de
auténticos documentos la muerte cató España, fecho en Polonia el 26 de febre
lica y religiosa de Antonio, Perez, ro de 1533, en el que, por los grandes
acompañando la protestacion de su fé servicios y fidelidad de Gonzalo Perez,
Su testamento cOrl OtrOS VarioS COm su secretario, le nombraba caballero
probantes y justificaciones no menos de espuela dorada, y le concedia la no
interesantes. -
bleza perpétua para sus descendientes:
Trasladados estos documentos al un decreto del emperador-rey, dado
fiscal, contestó éste en 20 de junio en Valladolid á 14 de abril de 1542,
oponiéndose con razones frívolas y vul por el cual legitimaba á Antonio Perez,
gares, á que se revisase la causa, sos hijo natural de Gonzalo Perez, en aten
teniendo con empeño que Antonio Pe cion á ser habido en muger soltera:
rez habia sido un verdadero herege una ejecutoria alcanzada del tribunal
ertinaz hasta la muerte. del Justicia mayor de Zaragoza en 7 de
Resolvió el consejo de la Inquisi mayo de 1544, en juicio contradictorio
cion pasar estos papeles al relator, en con la diputacion permanente del reino
cuyo poder permanecieron como olvi en la que se declaraba que Gonzalo Pe
dados hasta el 27 de setiembre. Insta rez era hijo legítimo y natural de Bar
han la infeliz viuda doña Juana Coello tolomé Perez, nacido en Monreal de
sus hijos, para que se decidiese su Aragon, secretario de requestas de la
peticion, y á fuerza de empeños de Inquisicion de Calahorra y de doña
personas influyentes en la córte y muy Luisa Martinez del Hierro, su muger
especialmente del obispo de Canarias legítima, natural de Segovia, y una in
don Fray Francisco Sosa, se logró al formacion de testigos hecha en Cala
fin que, contra el parecer del fiscal, horra en 1565 en la que se comprobaba
el 17 de enero de 1613, es decir, cerca la limpieza de sangre del Gonzalo, y no
de un año despues de haber presenta descender de judíos ni penitenciados
do la solicitud, se decretase la revision por la Inquisicion.
de la causa. Examinados los testigos citados en
Mandóse entonces al tribunal de la causa, trataron los jueces de llamar
ANTONIO PEREZ. 247

consultores para votar la definitiva. secretario que fué destado del Rey Fe
Entonces pidió Gonzalo Perez que se lipe Segundo nuestro Señor: el prime
suspendiese la sentencia porque que ro causado hasta veinte de octubre de
ria alegar en justicia y el tribunal se mil y quinientos y noventa y dos, que
lo concedió; y despues de ver el ale se dió y pronunció la sentencia de re
gato denegó en 16 de marzo de 1615 la lajacion contra él, y el otro causado
solicitud de los hijos de Perez, despues desde veinte y cuatro de noviembre de
de haber dejado pasar cerca de ocho mil y seiscientos y once, en que cons
meses sin tomar resolucion alguna en ta por el dicho proceso haber deseado
esta causa, á pesar de las contínuas es presentarse el dicho Antonio Perez en
citaciones y apremios del demandante este Santo Oficio, que despues se ha
que denegaba. seguido por sus hijos y herederos que
Consultada la resolucion de este ne despues de difunto han salido á la de
gocio con el consejo supremo de la In fensa de su memoria y fama: habiendo
quisicion, los ministros de este tribu habido sobre ello nuestro acuerdo y
nal, hombres que ya no tenian resen deliberacion con personas de letras y
timientos que vengar, ni se hallaban rectas conciencias.
comprometidos en sostener la primiti
va sentencia de los inquisidores de CHIRISTI NOMINE INVOCATO.
Aragon , examinaron detenidamente
los fundamentos de la peticion de la Fallamos atento los nuevos autos
familia de Antonio Perez y vieron que del dicho proceso, que debemos de re
la obra de la primera sentencia de la vocar y revocamos dicha sentencia da
Inquisicion habia sido dado por interés da y pronunciada contra el dicho An
puramente político, y sin hacer caso de tonio Perez, en todo y por todo, como
la nueva sentencia dada por los inqui en ella se contiene. Y declaramos de
sidores de Zaragoza, consultaron en 10 ber ser absuelta su memoria y fama,
de abril al rey Felipe III que debia re y que no les obste á sus hijos y des
vocarse aquella sentencia, rehabilitarse cendientes del dicho Antonio Perez el
la memoria de Antonio Perez y dejar dicho proceso y sentencia de relajacion
libres á sus hijos para que pudiesen para ningun oficio honroso, ni deber
ejercer cualquier oficio honroso en los les obstar á los dichos hijos y descen
diversos ramos de la administracion dientes lo dicho y alegado por el fis
de la monarquía. cal desta Inquisicion contra su limpie
El rey Felipe III escribió de su pu za. Y por esta nuestra sentencia defi
ño al márgen de esta consulta las si nitiva y juzgando, asi lo sentenciamos,
siguientes palabras: pronunciamos y mandamos pro tribu
«Hágase lo que parece, pues se dice nali sedendo.—El doctor Miguel Santos
que es justo.» de San Pedro.—El doctor don Juan
Devolvióse entonces el proceso por Delgado de la Canal.—El licenciado
el consejo supremo de la Inquisicion don Bernardo de Valdés y Llano.
al tribunal de Zaragoza el 2 de mayo
para que pronunciase su sentencia con Tres años habia tardado aquella
arreglo á las instrucciones que se le desgraciada familia en poder conseguir
daban. A pesar de la mala fé y del re la rehabilitacion de Antonio Perez;
sentimiento que todavía abrigaban los empero, en fin habia logrado salvar la
¿ de Zaragoza, á pesar de memoria de su padre. Comunicada la
haber detenido hasta el 16 de junio el sentencia y absolucion de Antonio Pe
cumplimiento de lo que tan terminan rez á su hijo Gonzalo, éste la mandó
temente se les mandaba, tuvieron que imprimir inmediatamente, y en la ma
dictar la siguiente sentencia. ñana de 23 de junio de 1615, aparecie
ron fijados ejemplares de ella en las
Visto por Nos los inquisidores apos esquinas y puertas de las calles prin
tólicos contra la herética pravedad y cipales de Zaragoza, y hasta en los pun
apostasía en el reino de Aragon y su tos donde cuatro años antes se habian
districto, los procesos causados en es fijado las cabezas de los que habian
te Santo Oficio contra Antonio Perez, perecido en el cadalso.
28
218 CAUSAS CELEBRES,

Habian puesto tambien en algunos ciudad de Zaragoza que tan lastimada


puntos un Vitor á Antonio Perez. Ape se hallaba por su causa, opinaba sin em
sar del tiempo y de las calamidades bargo por que se sobreseyese en esta cau
que habian ¿d, sobre aquella ciudad, sa y no se procediese mas en ella.
todavía se alegraron mucho sus habi Así el tribunal de la Inquisicion
tantes, y con músicas y algazara cele contra su natural índole, perdonó el
braron aquel suceso; pero pronto sa entusiasmo de aquel jóven. Desde en
bida la causa por los inquisidores, y tonces nada se ha vuelto á saber de es
habiendo averiguado que el impresor ta familia; pobre, quebrantada por
era un tal Juan de Lanaja, fué preso tantos disgustos, habiendo muerto casi
éste, recogidos los ejemplares y man al mismo tiempo de la rehabilitacion
dado uno al consejo ¿ la Suprema para de la memoria de Antonio Perez su des
que acordase el castigo de lo que el trigraciada viuda, sus hijos se confundie
bunal zaragozano miraba como un gran ron, lejos de la administracion y las
dísimo delito. funciones políticas, sin duda en algu
El 2 de julio mandó la Inquisicion na de las innumerables ramas de los Pe
suprema á la de Zaragoza, que hicie— rez tan comunes en España.
se comparecer á Gonzalo Perez y le Hemos consignado cuanto en los do
obligara á entregar los ejemplares cumentos que existen todavía, consta
que conservase y le reprendiese por el sobre la causa y estraordinario proceso
paso imprudente y temerario que ha de Antonio Perez. El célebre historiador
bia dado. Gonzalo Perez marchó inme don Modesto Lafuente, que tantos años
diatamente á Madrid, para implorar el ha permanecido en el archivo de Si
perdon por la ligereza con que habia mancas registrando los preciosos docu
procedido; pero el tribunal supremo le mentos que allí se encierran, ha co
puso preso, y en vista del sumario que piado una nota existente en los pape
rápidamente habia formado la Inquisi les de Estado, legajo 183, por la que
cion de Zaragoza, comprobando asi el consta que los papeles relativos á la
hecho de la publicacion de la sentencia famosa causa de Antonio Perez que es
impresa, aunque opinaba que era dig taban en poder del juez Rodrigo Vaz
no de gran castigo por el atrevimiento quez, fueron ¿ por órden ver
de mandar imprimir y fijar la copia de bal de Felipe II.
la senteneia, y rotular á su padre en la
IN || INTRNN, N\l WNW,
CABALLER0 DEL TOISON DE OR0.

(1570.)

Con pena tomamos la pluma , para procuró aparentar llenar las menores
escribir las sangrientas páginas de es fórmulas en su causa.
ta causa, negro borron bastante por sí Dudaríamos el espresar los hechos
solo á manchar la historia de Felipe II. de esta causa célebre, de que no han
Nuestros lectores, acostumbrados ya hablado los historiadores antiguos, y
al modo con que entendia los procedi en que hasta hace muy pocos años los
mientos de la justicia este soberano, mas modernos solo por rumores vagos
cuya religiosidad han elogiado hasta la que conserva la tradicion, han dicho
hipérbole algunos historiadores, se es º el señor de Montigny fué ejecuta
o secretamente en el castillo de Si
tremecerán de horror al ver la sangre
fria, la capciosidad, la forma y la ma mancas. No basta toda la fuerza de la
nera con que en medio de las fiestas y tiranía para sofocar la opinion, esta
alegrías de su matrimonio con la prin calla, pero al través del tiempo y por
cesa Ana, hija del emperador Maximi medio de los mismos que oprime con
liano II de Alemania, disponia los de su terrible peso se abre camino, y lle
talles del suplicio de uno de los mas ga á la posteridad.
distinguidos señores de su córte, con Mueren los déspotas y tras de los
el que habia vivido en aparente inti déspotas vienen los historiadores para
midad, y los medios de ocultarlo á los castigarlos como el remordimiento de
ojos del mundo. tras del crímen.
Podria ser justa en conformidad de Desaparecen los hombres, empero
lo que en el proceso resultara la sen quedan los escritos, y aunque muchos
tencia, empero siquiera fuese merece han sido cuidadosamente destruidos,
dor de la pena de muerte el señor de como hizo Felipe II con la causa de su
Montigny el modo aleve, capcioso, se hijo el príncipe don Cárlos, han que
creto con que se ejecutó, los medios dado otros y entre ellos los de la causa
pérfidos que se adoptaron para encu del señor de Montigny. Nosotros copia
ibrirlo y engañar al mundo, repugnan remos estos documentos sacados de
á la conciencia que debe tener la justi los originales existentes en el archivo
cia en ejecutar públicamente sus actos de Simancas. Sin estos documentos
justos, y forman un escandaloso con tal vez pasaria por apócrifa la relacion
traste, con la hipocresía con que se de esta causa. Tanto repugna á los
220 CAUSAS CELEBRES,

hombres de corazon honrado y gene Tuvo tambien grande empeño en


roso el cuadro de la perfidia y de la establecer la Inquisicion de España y
hipocresía en quien colocado en lo alto renovar los terribles edictos de Cár
de un trono debia tener la suficiente los V contra los hereges. Concedió to
fuerza y franqueza para no valerse de da su privanza al obispo de Arrás,
estos vicios cuyo ordinario asiento son Granvela, á quien puso como un tutor
las almas tímidas y débiles. al lado de Margarita, duquesa de Par
Flores de Montmorency, señor de ma, hija natural de Cárlos V á quien
Montigny y de Lenza, caballero de la habia dado al gobierno de Flandes.
órden del Toison de Oro, gobernador Granvela era un hombre inaccesi
y gran bailío de la villa de Tournay, ble á la piedad; se hizo odioso á los
Mortagne, Saint-Aman y Tournesis, era flamencos, y estos resentidos y quejo
uno de los señores mas poderosos, de sos se dispusieron á la sublevacion.
los Paises Bajos. Fué una de las vícti Guillermo de Nassau, príncipe de
mas de la crueldad del duque de Alba Orange, general en gefe de todo el
y la hipocresía política de Feli ejército que habia sido en tiempo de
p62 Necesitamos
1.
echar una rápida ojea Cárlos V y favorito de aquel empera
dor, el hombre que habia hecho la paz
da sobre los tristes sucesos de que con la Francia, el hombre de mas pres
fueron teatro las provincias de Flan tigio de aquel pais, se sentia desaira
des. do al ver que el gobierno se habia con
Encerraban estas en sí todos los cedido -á una princesa estrangera, á
gérmenes de una revolucion cuando una muger.
Cárlos V abdicó su corona en su hijo A estas tres causas hay que atri
Felipe II. buir el odio y las revueltas que inun
árlos V habia nacido en Flandes; daron de sangre aquellos estados, y
miraba aquellas provincias como su que consumieron las riquezas y los
patria, y habia respetado sus fueros y ejércitos españoles en una lucha cos
su independencia, si bien habia intro tosísima de largos años, y que termi
ducido en ellas tropas españolas. nó por la emancipacion de aquellos
Cárlos V habia tambien fulminado dominios de la corona de Castilla.
severos edictos contra los protestan La princesa Margarita tendia á la
tes, empero cuando vió que estos se moderacion, mientras el obispo Gran
disponian á abandonar su reino y á vela desplegaba una crueldad agena de
trasportar á estrañas tierras sus rique su estado, y que lejos de aplacar los
zas y su industria, modificó la ejecu conatos de sedicion los preparaba y
cion de aquellos severos edictos que promovia.
hubieran despoblado su patria, y les Aumentóse el ódio del pueblo al
concedió una especie de tolerancia en ver que aquel cruel prelado habia si
el ejercicio de su religion. do investido con la púrpura cardena
Al advenimiento al trono de Feli licia á peticion de Felipe II, por el
pe II fueron olvidadas estas considera pontífice Pio IV.
ciones, y lo que habia perdido en su A pesar de que el príncipe de Oran
padre la España, y escitado la suble ge, el conde de Egmont, el de Horn, y
vacion de las comunidades de Castilla, otros magnates habian sido nombra
lo ejecutó aquel en los Paises Bajos, dos gobernadores de varias provincias
olvidado de la funesta leccion que Cár é individuos de un consejo de estado
los V recibiera cuarenta y dos años en que se debian resolver todos los
antes en España. negocios, el cardenal los resolvia por
Felipe II habia dado toda la influen sí: para mayor desprecio les consulta
cia de aquellos paises á los españoles, ba en los casos de escasa y liviana im
y habia intentado la creacion de cator portancia, -

ce nuevos obispados sobre los cuatro Escribieron estos al rev en 25 de


º tenian, rebajando asi la autoridad julio de 1561 haciendo la dimision de
e los abades y su influencia en el sus cargos, puesto que Granvela era
ais, que consideró esto como una el que todo lo gobernaba, y solo se
infraccion de los fueros brabanzones. servia del nombre del consejo de esta
FLORES DE MONTMORENCY. 22
- - -
E=

do para que recayese la responsabili á Madrid para que informase verbal


dad de sus actos en individuos que mente al rey sobre el estado alarman
nada habian intervenido en ellos, pi te en que se hallaban los estados de
diendo ademas la convocacion de los Flandes; para hacer ver el estado mi
estados generales de Flandes. serable de su tesoro; y para hacerle
La situacion iba agravándose. Elademas presente que los príncipes de
cardenal rogaba al rey que fuese élOrange, los condes de Egmont y de
mismo á Flandes para evitar la perdi
Horn, el marqués de Berghes, el señor
eion de aquellos reinos. La gobernade Montigny y otros varios habian tra
tado de retirarse del Consejo de Esta
dora, viendo , la situacion en que el
ais se hallaba, mandó á Flores de do, habiendo desde luego dejado de
ontmorency, señor de Montigny, pa asistir á sus sesiones.
ra que viniese á Madrid, hablase con el Felipe II, siempre firme en su con
rey Felipe II, y le manifestase las cau ducta disimulada y cautelosa dilató
sas que hacian temer una pronta y contestar cuatro meses á cartas tan
-
funesta sublevacion en aquel reino. apremiantes.
Presentóse este noble flamenco á El 23 de enero de 1564 despachó de
Felipe II, y con libre franqueza le hizo Madrid al secretario Armenteros con
ver las causas que tenian agitado aquel órdenes terminantes para que se si
pais, á saber: la creacion de los nue guiese castigando á cuantos estuvieran
vos obispados sin intervencion de los inficionados con los errores del protes
naturales de aquel reino; el rumor del tantismo; y para que se evitase á toda
próximo establecimiento de la Inqui costa la reunion de los estados gene
sicion, y el odio que profesaban al car rales, y se hiciese volver al príncipe
denal Gran vela. de Orange y demas nobles disidentes al
Felipe II le manifestó que la crea Consejo de Estado, reservándose deli
eion de los obispados era para atender berar sobre la peticion de la separa
á las necesidados religiosas de aque cion de Granvela.
llos paises; que no era su ánimo esta Consultaba el rey todas estas reso
blecer en Flandes la Inquisicion espa luciones con el duque de Alba, con el
ñola; y que el odio que se tenia al car hombre á quien poco despues debia de
denal Granvela era infundado, porque mandar á inundar de sangre aquellos
aquel prelado no habia tenido ninguna paises, y á dejar en ellos tal horror al
¿ en las determinaciones que se nombre español que no ha bastado á
abian tomado en Flandes. borrar todavía el trascurso de tres
Volvió el señor de Montigny con siglos.
esta respuesta en diciembre de 562 y Aconsejaba el duque de Alba que
lejos de aplacarse los ánimos se escita se procurase dividir á los nobles entre
ron nuevamente, y se hicieron públi sí, disimular hasta que llegase tiempo
cas confederaciones contra el carde en que pudiese cortáseles las cabezas;
nal por el príncipe de Orange, los con y que el cardenal Granvela saliese de
des de Egmont y de Horn, el marqués Flandes, empero no como de órden del
de Berghes, el mismo señor de Mon rey sino como fugado y temeroso por
tigny, y los mas principales barones y que alli peligraba su vida.
señores de los Paises Bajos. Llevábase en esto Felipe II, que en
El 11 de marzo de 1563 pidieron todas sus acciones caminaba con el
reverentemente al rey la separacion mas profundo disimulo, el objeto de
de Granvela. La misma gobernadora que no apareciese como una concesion
los apoyaba, y se mostraba ella dis suya una medida de que al cabo de
puesta á hacer dimision de su gobier mucho tiempo se habia convencido que
no. Tres meses tardó el rey en con era útil.
testar exigiendo que viniese uno de Asi es que en el mes de marzo de
aquellos señores á Madrid, designando 1564 salió Granvela de los paises de
al de Egmont, pero éste rehusó bajo Flandes dándose el aire de fugitivo, y
diversos pretestos el verificarlo. refugiándose en Borgoña. El pueblo y
Mandó entonces la princesa regen los nobles celebraron con la mayor ale
te á su secretario Tomás Armenteros gría su salida: desencadenáronse en
222 CAUSAS CELEBRES.
===

pasquines y en caricaturas, vengando á su política. Así es que separándose


con el ludibrio las persecuciones que del dictámen de este consejo resolvió
habian sufrido de aquel implacable mantener á toda costa el tribunal de
prelado. la Inquisicion, continuando en la per
Cuando se regocijaban los pueblos secucion de los protestantes; y al mis
de Flandes de verse libres del terrible mo tiempo que despachaba al conde de
azote de Granvela, recibió la princesa Egmont (abril de 1565) con las cartas
regente la órden de establecer la In mas satisfactorias en que manifestaba
quisicion, y probláronse inmediata las ideas mas tolerantes para los fla
mente de protestantes los calabozos y º ¿? le colmaba de distinciones
fueron conducidos al patíbulo. y mercedes personales, mandaba en
En algunas partes el pueblo se lan pos de los despachos de conciliacion
zaba sobre las hogueras para arrancar otros terribles en que prevenia á la go
las víctimas, teniendo el verdugo que bernadora continuase la persecucion de
rematarlas á puñalaladas, en medio de los hereges, y mantuviese en todo su
las pedradas y los silbidos de la mu vigor los edictos imperiales, y publicase
chedumbre como sucedió en Amberes el Concilio de Trento sin restricion al
y en Bruges, donde el senado mismo guna y reuniese el Consejo de Estado.
arrancaba á los reos de manos de los En vano el conde de Egmont decia
ministros de la Inquisicion y encarce á todos las órdenes que traia del rey; en
laba á estos. vano se quejó á éste del compromiso en
Veíase comprometida la regente, y que ponia su nombre dando órdenes con
su compromiso se aumentaba con la trarias á las que él mismo habia trai
órden terminante que recibió de hacer do por escrito; en vano le amenazaba
guardar y cumplir en Flandes, corno con retirarse del servicio; la goberna
ley del reino, las decisiones del Conci dora, ateniéndose á las órdenes di
lio de Trento, que resistian los flamen rectas de Felipe II publicaba el conci
cos á imitacion de la Francia que no lio, protegia con todo su poder la In
las habia admitido. quisicion y continuaba las medidas de
-

La duquesa de Parma, creyó con represion contra los protestantes; si


veniente entonces enviar á España al bien al mismo tiempo procuraba con
conde de Egmont, y este magnate fla carácter templado aminorar en lo po
menco que antes habia rehusado venir sible el rigor, escribiendo carta sobre
á España, admitió entonces esta comi carta al rey haciéndole presente , el
sion y fué recibido por Felipe II en compromiso en que se hallaba el reino
marzo de 1565 con la distincion debida y que de un momento á otro debia es
al ilustre caudillo á quien algunos años tallar una conflagracion y rebelion uni
antes habia debido este monarca el versal. -

triunfo de Gravelines. Felipe II, sin considerar la crítica


Convocó Felipe II una junta de teó situacion en que se hallaban aquellos
logos para consultarles sobre si debia paises, repetia sus órdenes de rigor.
conceder la libertad de conciencia que Entonces varios nobles se pusieron de
solicitaban las ciudades flamencas. He-, acuerdo con los protestantes alema
mos visto en la causa del príncipe don nes, ingleses y franceses, y formaron
Cárlos lo aficionado que era Felipe II á en Breda una confederacion compro
esta clases de consejos teológicos. Este metiéndose bajo juramento á resistir
consejo de conciencia consultó al rey con todas sus fuerzas y rechazar la In
que era conveniente la concesion pa quisicion y sus edictos.
ra evitar los males que de una revo— Millares de nobles y caballeros se
lucion podian seguirse á la iglesia uni adhirieron al célebre compromiso de
versal, y de que en ello tampoco habia Breda. Los principales nobles, como
ofensa á Dios, por lo que opinaban se Orange, los condes de Horn, de Ber
les podia dejar la libertad de cultos sin ghes, Egmont, Montigny y otros eran
ue en ello se gravase la conciencia agenos á esta confederacion y apoya
¿ rey en lo mas mínimo. ban todavía al rey aunque vituperaban
Felipe II no trataba de acallar su en su interior la ceguedad con que pro
conciencia, sino de buscar un pretesto cedia aquel monarca. De nada habia de
FLORES DE MONTMORENCY. 223

servirles esta conducta, sus ideas ha testacion era que se ocuparia de aque
bian de ser mas tarde juzgadas como llos negocios cuando se lo permitiesen
actos positivos. los de España; que él mismo pensaba
El 2 de abril de 1566, el conde Luis pasar á los Paises Bajos y que los dete
de Nassau, hermano del de Orange, nia en la córte para marchar en su
entró en Bruselas con gran número de agradable compañía. Fundado en estos
nobles y habitantes de las ciudades, pretestos les negaba las contínuas sú
para presentar una peticion á la prin plicas que hacian para volverse á sus
cesa Margarita para que aboliese la In estados y al lado de sus familias.
quisicion. Venian armados y la gober Solicitaban entretanto en los Paises
nadora exigió se la presentasen sin ar Bajos la convocacion de los Estados ge
mas, y toda aquella inmensa multitud nerales, y en vano la gobernadora, ins
á pie, vestidos con un trage gris, sin tigada por las tumultuosas rebeliones
armas, insignias, ni condecoraciones, populares de ocho, diez y veinte mil
se dirigió procesionalmente al palacio personas que se verificaban en las po—
de la gobernadora. Entonces uno de los blaciones, apremiaba al rey; éste la
cortesanos, al ver el efecto que produ mandaba que se mantuviese siempre
cia aquella larga é imponente proce firme en la negativa, pero encargándo
sion en la princesa, la dijo que no te la que no revelase á nadie que era por
miese, que no eran mas que unos órden suya. La autorizó para otorgar
pordioseros. Esta palabra hizo fortuna, un perdon general á los sublevados;
esta palabra sirvió para designar á to mas al mismo tiempo, y aqui se ve pal
dos los enemigos de la Inquisicion, que pable la política doble de Felipe II., le
tomaron por divisa y adoptaron el tos vantaba en Madrid un acta ante el no—
co vestido gris y colocaron en los som tario Pedro de Hoya, y á presencia del
breros y en el pecho una escudilla co º
de Alba, del licenciado Francis—
mo la de los mendigos. Esta en un co de Menchaca, y del doctor Martin de
principio fué de palo; mas despues, los Velasco, en 9 de agosto, consignando
¿ e los confederados las llevaron que aquel perdon ó amnistía lo daba
e plata y oro. forzado, y no era un acto libre y espon
La gobernadora respondió á aque táneo, y que no se conceptuaba ligado
lla desarmada aunque imponente ma ni comprometido por él, reservándose
nifestacion, que intercederia con el el derecho de castigar á los culpables,
rey Felipe II, para lo que envió á Es— y especialmente á los autores ó moto—
paña al marqués de Berghes, goberna res de los disturbios. Esta acta notable,
dor de Nao, y al baron de Montigny, que ella sola basta para revelar el ca
que lo era de Tournai, que al mismo rácter de Felipe II., se halla escrita en
tiempo trajeron una peticion de todos latin en el archivo de Simancas.
los caballeros de la órden del Toison Penetráronse sin duda las intencio
de Oro y gobernadores de las provin nes del rey, porque estalló la revolucion
cias, conforme con aquella disposicion. religiosa en los Paises Bajos; hubo tu
Mientras marchaba esta embajada á multo en la mayor parte de las pobla
Madrid, Felipe II insistia siempre en ciones; se saquearon, profanaron y des
que no se consintiese en la modifica truyeron los templos; rios de sangre
cion de los edictos ni en la supresion corrieron en Flandes, Sanit-Omer, Iprés,
del Santo Oficio. Llegaron á Madrid el Amberes, Gante y otra multitud de
marqués de Berghes y el baron de Mon ciudades flamencas; casi á un mismo
tigny, se presentaron al rey. Reci tiempo se vieron invadidos por los pro
biólos Felipe II. con la mas cumplida testantes los templos y ¿ to
cortesía, con la mayor afabilidad. Tú dos los objetos del culto. La goberna
volos contínuamente á su lado, acom dora cedió á la necesidad y espidió un
pañábanle en sus frecuentes viages al edicto en 23 de agosto prometiendo
Escorial y á los demas sitios reales; que si se desarmaba al pueblo y se ter
pero pasaban meses y meses sin que minaban los escándalos, no se usaria
diese una resolucion terminante á las de la fuerza y se permitiria el uso de la
contínuas súplicas que le hacian estos religion protestante.
dos próceres flamencos; su única con La revolucion tomaba inmensas pro
224 CAUSAS CELEBRES.
-
- -

porciones; la princesa regente escribia varios nobles, entre ellos el conde de


al rey, y el rey siempre firme en su po Egmont, niéganse otros, y entre ellos
lítica disimulada y de dilacion, no aca el de Horn, hermano del señor de Mon
ba de contestar. Ofreció para calmar los tigny, y son despojados de sus gobier
ánimos ir á Flandes y enterarse él mis nos. El príncipe de Orange, que pre
mo de las necesidades de los pueblos, vee la suerte que espera á Flandes con
pero al mismo tiempo con ánimo deci la llegada del duque de Alba, á quien
dido de no poner los pies jamás en se supone precursor del rey, se niega
aquel pais trató de sujetarlo por las á los ruegos y á las amenazas de la Go
armas, y para esto nombró al duque de bernadora, y se retira con su familia á
Alba, general del ejército que debia sus estados de Nassau en Alemania. En
enviará aquellas provincias. vano trata de llevarse consigo al con
El único remedio que se veia á tan de de Egmont, éste permanece fiel á la
tos males era la presencia de Felipe en causa del rey, que debia darle en pre
aquellos paises. Los nobles flamencos, mio el cadalso.
el cardenal Granvela mismo desde Ro La retirada de Orange, y el aban
ma, el papa Pio IV, escriben en este dono en que deja á los protestantes
sentido al rey en enero de 1566. Feli Egmont, desconcierta y hace desban
pe, procediendo siempre con su polí darse á los de la liga.
tica lenta y simulada, gana tiempo, Era ya inútil la mision del duque
ofrece solemnemente á todos su ida, de Alba á su llegada, empero su polí
llega hasta anunciarla solemnemente á tica funesta debia hacer renacer la su
las córtes de Castilla, y engaña á to blevacion en mayor escala, y destruir
dos. En su lugar envia al duque de Al la obra de la hábil y conciliadora go
ba don Fernando Alvarez de Toledo, bernadora.
cuyo nombramiento solo es un progra El duque de Alba se presenta con
ma de severidad, crueldad y sangre. su ejército, no como un general á las
Reune el duque un ejército de ocho órdenes de la princesa gobernadora,
mil ochocientos infantes y mil doscien sino como el delegado del monarca es
tos caballos de lo mas escogido de los pañol, revestido ¿ las mas ámplias y
tercios de Italia, y se embarca con omnímodas facultades. En vano si
ellos en Cartagena en ¿ de 1567, y guiendo el disimulo de su digno amo,
la navegacion y una enfermedad que protesta que no viene á alterar las dis
sufre retarda su llegada á Flandes has posiciones de la gobernadora, sino á
ta el mes de agosto. ser el dócil ejecutor de sus mandatos.
Entretanto la gobernadora con su Mostró sus poderes para castigará
política y las solas fuerzas que tenia, los rebeldes, establecer tribunales es
con una energía y una firmeza superior peciales, y juzgar por sí á los caballe
á su sexo, somete la rebelion, sujeta ros del Toison de Oro, en contraven
sucesivamente las ciudades sublevadas cion de los fueros y estatutos de esta
de Henao, Brabante, Holanda y Frisia, órden soberana.
ocupa á Tournay, cuyo gobernador, el La gobernadora entonces justamen
señor de Montigny, se hallaba en Es te resentida, y amante de aquellos
paña al lado de Felipe II; entra en Va paises que habia regido con tanto acier
lenciennes, Amberes, Maestrich, Bois to por nueve años, en los que habia te
le-Duc, Utrech, Amsterdam y Gronin nido que ser instrumento de males,
ga, y hace su entrada triunfal como pa porque á ello le forzaba el rey su her
cificadora en Bruselas, y revoca el mano, mandó su dimision el 5 de se
edicto en que permitia antes el pacífi tiembre de 1567, justamente ofendida
co uso del culto protestante, y castiga de que aun sin su conocimiento hu
ejemplar y severamente á los cabezas biese creado el duque de Alba un tri
de las rebeliones. bunal de siete jueces, á los que some
Contando con la venida próxima de tia á todos por alta y elevada que fue
Felipe II, exige de los señores nobles se su categoría, y que se denominó el
un nuevo juramento de fidelidad que Tribunal de Sangre, , tribunal que lle
los comprometa á auxiliarle en cuanto nó cumplidamente la medida de su
les mandase. Prestan este juramento nombre.
FLORES DE MONTMORENCY. 225
- -

El duque de Alba citó á los condes cuaresma, hizo prender ochocientas


de Egmont y de Horn y á los principa personas, y todas fueron ajusticiadas.
les nobles á una conferencia para le— Continuó la matanza toda la cuaresma,
vantar una fortaleza en Amberes, y con y la posteridad se negaria a creer es
sorpresa, con el mas esquisito sigilo, tos horrores, si no existiesen origina
fueron presos por el hijo del duque don les en el archivo de Simancas las car
Fernando de Toledo, y conducidos al tas del mismo duque de Alba, de las
castillo de Gante. que algunas ha copiado en su escelen
En vano la gobernadora se indigna te obra de la Historia de España el in
y quiere evitar la triste suerte que es— fatigable y entendido escritor don Mo
pera á los mismos que antes la habian desto Lafuente.
ayudado á pacificar á Flandes; el du -
Las órdenes del rey cada vez eran
que se escuda con las órdenes termi mas severas, el conde de Berghes y el
nantes del rey. señor de Montig y, que hemos visto
La gobernadora, cuya dimision fué que se hallaban al lado de Felipe II,
admitida, salió de Flandes, y su sali cuidadosa y estudiadamente detenidos
da fué la señal de un derramamiento para que no pudiesen volverá los Pai
inmenso de sangre en los cadalsos. ses Bajos á pretesto de que irian con
El Tribunal de Sangre trabajaba sin el, no podian escapar á la persecucion
descanso, reuníase en la casa del mis como los flamencos.
mo duque de Alba, tenia dos ó mas se El sepulcro mismo no era segu
siones diarias, y lo presidia el secreta ro asilo contra las iras del rey Fe
rio del duque, don Juan de Vargas, que lipe II. El conde de Berghes, cuan
de hombre solo tenia la figura, y el co do parecia que se hallaba en mas fa
razon de un tigre sediento y jamás vor con el rey, murió en 21 de mayo
harto de sangre. de ¿ algunos historiadores supo
Este tribunal formó las causas de nen que fué envenenado. Nada lo prue
los caballeros del Toison de Oro, de los ba convincentemente, empero dejamos
nobles, de los plebeyos, de todos. An á nuestros lectores que por los suce
te él todos eran iguales, y esta igual sos deduzcan las consecuencias segun
dad era la muerte. Los condes de Eg su eriterio. Al morir mandó el rey que
mont y el de Horn, hermano de Mon le secuestrasen todos sus bienes, que
tigny, fueron decapitados públicamen consistian en 1.000,000 de florines, y
te; el conde de Egmont, que habia ga que su hija fuese arrancada del lado de
nado la batalla de Gravelinas! Sus bie su madre y traida al palacio de Madrid,
mes fueron confiscados, y al recomen hasta que llegase la edad de casarla.
dar el mismo duque de Alba á la es— Aun no habia llegado la hora de ar
posa del desgraciado conde, Sabina rojar la máscara del disimulo. Conti
Palatina, duquesa de Baviera, que por nuaba el rey prodigando sus favores al
la confiscacion quedaba reducida á men conde de Montigny, si bien cada dia
digar, y remitir al rey la carta que so miraba con mas sospechas la tierna
bre el cadalso habia escrito pidiendo amistad que le profesaba el príncipe
un socorro para su familia el conde de de Asturias don Cárlos.
Egmont en 5 de junio de 1568, contes Cuando comenzó su obra de sangre
taba el rey al feroz duque de Alba en los Paises Bajos el duque de Alba,
en 18 de julio. Al conde de Egmont no el rey la continuó en las personas que
hay mas que encomendarle á Dios; de tenia á su alcance en Madrid. Hemos
su muger é hijos veré lo que será mejor visto que no perdonó ni á su propia fa
hacer, y con otro os avisaré la resolu milia; hemos hecho asistir á nuestros
cion que tomare. lectores á la prision de su hijo primo
Corria la sangre á torrentes, y el génito don Cárlos, y hemos al hablar
mismo duque se jactaba de ello, y aun de su causa referido que el orígen y el
se quejaba de la ¿a de los jueces motivo de aquella causa que hizo es
del Tribunal de Sangre, elogiando solo tremecer de horror al mundo, y que
la actividad de su secretario Vargas. repugna á todo corazon sensible y ge
Solo en el dia del miércoles de Ceniza, neroso, fué el suponerse y aun haber
para comenzar de un modo digno la se adquirido elsencimiento de que
226 CAUSAS CELEBRES,
==EE.

aquel infeliz y ambicioso príncipe ha


bia querido pasar secretamente á Flan EL REY.
des, que compadecia á los habitantes
de aquel desgraciado pais, que mur Conde de Chinchon pariente, nues
muraba de las medidas del duque de tro alcaide de los alcázares de Se
Alba. govia, ó vuestro lugarteniente en el
No era posible que Montigny, el dicho cargo. Porque yo he mandado
amigo del príncipe, el hermano del llevar preso á los dichos alcázares á
conde de Horn quedase libre en el Mr. de Montiñí caballero de nuestra
momento en que creyese Felipe II que órden del Tuson, yo vos mando lo re
debia de cesar el disimulo con que has cibais en ellos y le tengais preso y á
ta entonnes lo habia ido entreteniendo buen recaudo con ocho hombres de
á su lado. - -
guarda que sean de confianza demás y
Hacia dos años que habia muerto allende de la guarda ordinaria que te
el marqués de Berghes; no era posible neis en los dichos alcázares: á los cua
que el verdugo derribase su cabeza, les dichos ocho hombres señalareis el
mandose formar causa á su memoria, salario que os pareciere justo por cada
y ese juicio y el del señor de Montigny un dia de los que durare la dicha pri
se sometia al inapelable fallo del Tri sion, y no soltareis ni dejareis salir de
bunal de Sangre de Bruselas, aunque los dichos alcázares al dicho Mossr. de
ambos eran caballeros del Toison de Montiñí de noche ni de dia en sus pies
Oro, que por sus estatutos solo pue ni en ajenos ni en otra manera alguna
den ser juzgados por el rey y por doce hasta que por mí os sea mandado otra
caballeros de su órden. cosa, por que ansi conviene á mi servi
Un dia cuando mas ageno se halla cio y no hareis lo contrario. Fecha en
ba de la desgracia que ie amagaba el el Escurial á 21 de setiembre de mil
jóven y valiente señor de Montigny, é quientos y sesenta y siete años.
cuando mas habia redoblado sus afec Yo EL REY.
tuosas demostraciones el rey Felipe II,
en una de las cacerías á los bosques de Encerrado en el alcázar de Segovia
Segovia al volver al Escorial fué de re pasaba tristemente sus dias el magna
pente preso al entrar en palacio el te flamenco estrechamente vigilado, si
dia 21 de setiembre de 1567 para ir á bien proporcionándole todas las como
hacer un rato de compañía como solia didades que exigia su alta posicion y
al príncipe de Asturias. clase, dejándole su mayordomo y al
Grande fué el asombro del señor de gunos de los criados que con él habian
Montigny, no acertaba á conciliar aquel venido desde Flandes y permanecido
acto de desusado rigor con las mues durante su larga estancia en la córte
tras de afecto singular con que habia del rey de Castilla, especialmente dos
sido favorecido durante aquella misma pages jóvenes á quienes queria mucho.
tarde. Quiso hablar al rey, empero el En su prision llegaban á él las noticias
rey se hallaba devotamente ocupado de los tristes sucesos acaecidos en los
con los religiosos del monasterio alter Paises-Bajos, y la severa conducta que
nando con ellos los divinos salmos. desplegaba contra los señores y prin
Tuvo que resignarse Montigny, y cipales , nobles de aquellos paises el
conducido con segura escolta de arca duque de Alba. s

buceros salió del Escorial, y á la ma Contristábale la prision que sufria


ñana siguiente llegó al alcázar de Se en el castillo de Gante su hermano el
govia confiando el preso al conde de conde de Horn y el de Egmont: co
Chinchon, que alli se hallaba, sin duda nocedor del carácter de Felipe II y de
por haber sido prevenido por el rey, á la crueldad del duque de Alba, temia
quien entregó la siguiente carta (1): que pudiese cometerse un atentado
contra aquellos poderosos caballeros,
(1) El original se halla en el archivo de Si no obstante los grandes servicios que
mancas. Estado, legajo 543. habian prestado al monarca, y el favor
que éste les habia en otro tiempo dis
pensado. Veia en su propio ejemplo lo
FLORES DE MONTMORENCY. 227

ue hay que fiar en las demostraciones por la posta; que para proporcionarse
e afecto de los reyes. caballos habian obtenido cartas de re
Cuando al cabo de nueve meses de comendacion para el maestro de postas
prision en Gante llegó á su noticia el de Burgos, don Juan de Acuña y don
suplicio que habia sufrido su hermano Francés de Alava, proponiéndole que
el conde de Horn, el de Egmont, y si podia hacerle salir y bajar de la tor
otros nobles señores en la plaza de re le llevaria hasta Hernani, y de alli
Bruselas el 5 de junio de 1568, no pu le pasaria á Francia.
do menos de afectarse hondamente su Habian discurrido el modo de apear
corazon con la desgracia de su querido se en una casa, donde se dejaria ver
hermano, y meditar que tal vez á él le el que la carta escribia lo menos posi
estaba destinado mas tarde presentar ble. Al llegará Hernani debian diri
igual espectáculo en Castilla. Sus ami girse á San Sebastian, y tomar una
os, su muger, emplearon varios me chalupa, si podia ser de algun francés,
ios para proporcionarle su fuga, y para trasladarse á San Juan de Luz. En
como sus bienes, que eran cuantio cuanto á la hora y el dia de bajar del
sos, no estaban todavía confiscados, alcázar, se habia determinado dejar la
enviaron á España varias personas ejecucion del proyecto para un lunes,
decididas para que procurasen la fuga porque no podrian hacerlo en sábado,
del preso. Estas personas, al ver el en razon á que el alcaide tenia la cos
triste resultado que habia tenido la tumbre de ir á ver oir misa al señor
causa del conde de Horn, sentenciado de Montigny, todos los domingos, y
sin oírsele de la manera que acostum tambien porque los domingos se pa
braba el Tribunal de Sangre de Bruse seaba casi toda la noche delante de la
las, no omitieron medio alguno para puerta del alcázar.
preparar la evasion del señor de Mon Debia un criado que se hallaba en
tigny, del alcázar de Segovia. cerrado con Montigny en la fortaleza,
Aunque se les dejaba bastante lati hacer y representar la persona de su
tud á los criados para entrar y salir señor, para que no le echasen tan
en la fortaleza, se ejercia la mas viva pronto de menos y darles tiempo de
vigilancia. Con dificultad penetraba al que pudiese ganar, por medio de las
¿ ó aviso, y cuando el mayor— postas alguna delantera. El medio de
omo de Montigny con varios hombres descolgarse de la torre era quitar las
decididos que habian venido de Bruse cuerdas que habia en los catres y ca
las á poner en libertad á su amo, ha mas. Aconsejábanle en esta misma car
bian combinado un plan de evasion y ta otras varias precauciones, como la
dispuesto todos los medios para mar— de hacer que con cualquier pretesto
char rápidamente desde aquella forta despidiese á un mozo de su cocina
leza á las fronteras de Francia, fué mandándole á algun recado, ó al bos
sorprendida toda la clave del proyecto que en la tarde del domingo para que
por una carta que en 14 de julio de no pudiese volver sino el lunes por la
1568 dirigia una persona desconocida noche ó el martes. -

al señor de Montigny, cuya carta fué Hablábanle en esta carta de un pa


encontrada dentro de un pan que se e que habia traido tambien unos ca
mandaba para la comida á do Señor. allos de Madrid con unos sacos ó car
Esta carta se hallaba escrita en el gas, aparentando ser de objetos que
idioma francés. Aun cuando no tenia dirigian para el alcázar, á fin de evitar
el nombre de la persona que la dirigia toda sospecha, porque dos caballos
dejábase entender que debía ser ¿ que tenia uno de sus criados y que ha
mayordomo de Montigny, ó de alguno bian llegado á Segovia se los habia
de sus criados mas adictos. quitado el alcaide del castillo, con ob
En aquella carta le manifestaban jeto de evitar que pudieran servir pa
como habian dispuesto que personas ra la fuga. Recomendábanle tambien
resueltas le esperasen en Hernani; que que se cortase la barba en la tarde del
de alli habia marchado un polaco, cuyo lunes, y que se disfrazase lo mejor po
nombre no se designaba, derecho á ¿ para que no pudiese ser recono
Aranda, para ir despues á Fuenterrabía C1010,
228 CAUSAS CELEBRES.
=3

- Reconvenia el autor de esta carta manos de Montigny: sirvió solo, si


al señor de Montigny acerca de la hora guiendo siempre el sistema de disimu
de las ocho que al parecer éste habia lo que en todas sus acciones adoptaba
fijado, diciéndole que se maravillaba Felipe II., para redoblar la vigilancia
mucho de ello porque en el mes de ju sobre el preso; para adquirir la certi
lio á aquella hora la noche apenas co dumbre de que este, teniendo inteli
menzaba, y que asi no podia ser sino gencia con gentes de fuera preparaba
á las nueve ó algo despues; encargaba los medios de su evasion.
que redoblase sus precauciones para Impacientábase el señor de Montig
que no se traspirase nada de aquel ny viendo trascurrir los meses en su
proyecto, porque si no el alcaide haria prision, en que ningun juez le pregun
poner guardas al pie de la torre del al taba, ni creia por eso que se le formase
cázar, como lo habia hecho ya sin adi causa alguna, porque el proceso se se
vinar el motivo algunas otras noches guia callada y silenciosamente en Bru
antes. Decíale tambien que por uno de selas por el Tribunal de la Sangre, por
los criados del conde de Chinchon sabia aquel mismo tribunal que habia llevado
que le habian quitado los cuartazgos ó al cadalso á su hermano.
caballos, y que era tal la vigilancia que La larga reclusion que sufria, la in
tenian con él que era menester proce certidumbre de su suerte, le hicieron
der con mucha cautela y cuidado, y caer en una gran melancolía, creyendo
que si supiese los pareceres que te— que desbaratado el proyecto de la fu
mian sobre él y sobre los que intenta ga, no habia vuelto á anudarse éste; y
sen libertarle se espantaria; y termi con el objeto de distraerle de la triste
naba la carta encargándole la cautela, za terrible que afligia su corazon, per
porque en cuanto á él todo se reduci mitió un dia el conde de Chinchon que
ria á volverle al sitio donde estaba si entrasen en la estancia que le servia
fuese cogido, pero que cuantos tomasen de prision una cuadrilla de muchachos
parte en la evasion serian completa y mugeres flamencas que habian apa
mente arruinados. recido en Segovia, y que tocando va
Esta carta, que original se conser rios instrumentos recorrian las calles
va tambien en el archivo de Simancas, entonando canciones de su pais, y re
que no hemos trascrito por lo pesa cogiendo con las limosnas medios para
do y fastidioso de sus detalles, y por vivir. -

que para su cabal inteligencia era ne— Estaba todo esto tan bien combina
cesario estar en las cosas que debian do, tenia tal aire de casualidad, que
haber pasado secreta y verbalmente sin violencia ninguna hizo mostrase el
entre Montigny la persona que le preso los deseos que tendria de oir de
escribia, que era la que dirigia el pro cerca aquellas canciones que le recor
yecto de evasion, fué puesta en manos daban su pais natal. No viendo el conde
de Felipe II. de Chinchon peligro ninguno en acce
Siguiendo este monarca la costum der á tan sencillo deseo, hizo que aque
bre que tenia de leer por sí mismo y llos pobres flamencos entrasen por la
meditar los escritos que se le entre noche en el alcázar, y distrajesen por
aban, y anotar las observaciones ó algunas horas al señor de Montigny, y
juicio que de ellos formaba, escribió al á un á él mismo y los empleados del al
márgen de este documento al hablar cázar que asistian á aquel improvisado
del page que la carta llama polaco, lo é inocente concierto.
siguiente: Grande fué el contento que mostró
«Este creo que es el page francés el señor de Montigny al oir las cancio
de Montigny, que yo topé el dia que nes flamencas, y manifestó su deseo de
vino, que el conde de Chinchon me que se repitiese aquella diversion para
arece que me dijo que creia se llama la noche siguiente: recompensó públi
a asi. Bien será saberlo, aunque por camente y con la largueza propia de su
otra parte parece que debe de ser uno generosidad á aquellos infelices que
tan buen rato le habian proporcionado,
que se llama Antonio.» estos, agradecidos al permiso del go
Esta carta interceptada no llegó á ernador, manifestaron volverian á la
FLORES DE MONTMORENCY. 229
--
gºs

noche siguiente, para lo cual, dejaron pe II permanecia inflexible; negóse á


en la misma estancia las vihuelas, los lo que le pedia en las cartas que le di
tamboriles y demas instrumentos con rigia el emperador, y á una emba
que acompañaban sus canciones. Aque jada que le mandó espresamente con
llos cantantes eran parciales de Mon este objeto por medio del archiduque
tigny: habian dejado dentro de los ins Cárlos, que envió esclusivamente con
trumentos músicos las cuerdas con que este propósito á Madrid, y con el de
habia de descolgarse de las ventanas concertar el matrimonio de la hija del
del castillo. emperador Maxiliano, la princesa Ana,
Iba á burlarse la vigilancia esquisi la que habia sido antes prometida es
ta del alcaide del alcázar de Segovia; posa del desgraciado príncipe don Cár
todo estaba á punto de lograrse para el los. Grande contento causó á Felipe II
dia siguiente, cuando un criado, de la proposicion de este matrimonio; ne
quien inconsideradamente habian te cesitaba tener hijos varones que le su
nido necesidad de valerse, temeroso de cediesen en las coronas que ceñian su
lo que pudiese suceder con los que frente.
uedasen en el alcázar despues de la Preparóse España con grandes fies
¿ de Montigny, lo avisó y todos fue tas para recibir á su futura reina,
ron descubiertos. Cuando se fué á bus que debia venir á la península pasando
car en la ciudad á aquellos fingidos po por Flandes; el duque de Alba trataba
bres cantantes, habian desaparecido. de dar la vuelta á España acompañán
Desde entonces la prision del baron dola, habiendo pacificado ya de la ma
de Montigny se hizo mas estrecha: las nera que han visto nuestros lectores
menores acciones parecian á los ojos aquellos paises, y pretestando el esta
de sus duros carceleros medios de eva do de su salud, su cansancio y el nin
sion; asi es, que cayó entonces real gun temor que habia de alteraciones,
mente enfermo, y en este estado se pidió al rey le relevase del gobierno
guia cuando el duque de Alba iba á dar de aquellas provincias. El rey creyó,
término á la causa que en Bruselas se accediendo á las vivas instancias del
le seguia. emperador y aun á las insinuaciones
Mientras en el alcázar de Segovia del duque de Alba, que debia otorgar
pasaba triste y lánguidamente su vida un perdon general á las provincias;
el señor de Montigny, continuaban cor mas siguiendo siempre su sistema de
riendo arroyos de sangre en los cadal cautela y de disimulo, mandó cuatro
sos de Flandes con las sentencias que proyectos de perdon para que el duque
diariamente dictaba el tribunal de san hiciese lo que creyese mas convenien
gre. A la sentencia de muerte seguia te, encargándole que si se decidia por
ordinariamente la de confiscacion; asi el menos ámplio y estenso, tuviese
el duque de Alba, al paso que diezma ocultos los demas para que no recaye
ba aquellas hermosas provincias, lle se sobre él la odiosidad de aquella me
naba con los tesoros que arrancaba á dida. El de Alba no se decidió por nin
los que hacia perecer en los patíbulos, guno de los cuatro proyectos, contes
las arcas reales. Tantas crueldades, tando al rey que faltaba todavía fallar
tantas desgracias llamaron la atencion dos causas: la del marqués de Berghes
del emperador Maximiliano, el que im y la del señor de Montigny, que no ha
pulsado por los príncipes de Alemania, bian llegado á sustanciarse todavia. El
se dirigió á Felipe II recomendándole primero habia muerto hacia mas de
templase su política rigorosa, y sus dos años en Madrid; el segundo vivia
pendiese los castigos que se hacian con muriendo encerrado desde 1567 en el
los protestantes flamencos. No sola alcázar de Segovia.
mente se dirigió directamente al rey, El duque de Alba escribió al rey
sino que el emperador mandó comi desde Bruselas en 18 de marzo de 1570,
sionados al duque, de Alba para que mandándole copia de la sentencia del
fuese mas moderado y tolerante en su marqués de Berghes. En ella era conde
gobierno. Hasta quiso hacer por sí una nado á muerte y á la confiscacion. Es
reconciliacion entre el gobernador es ta sentencia se pronunció en la forma
Pañol y el príncipe de Orange. Feli ordinaria en el Tribunal de Sangre.
230 CAUSAS CELEBRES.
- =

En la de Montigny no se observaron Alba para que las justicias de los reinos


ni aun las prácticas de aquel tribunal de Castilla ejecuten la sentencia por él
cruel é irregular. El duque de Alba con pronunciada contra Flores de Montmo
sultólos pareceres de los jueces de aquel ranci, señor de Montigny. Fecha 18 de
tribunal, enseñándoles el proceso y marzo de 1570.
exigiéndoles le diesen su dictámen fir
mado y separado. Guardó estos pare Don Fernando Alvarez de Toledo,
ceres, y reunido solo con su secreta duque de Alba, etc. Hago saber á los
rio Juan de Vargas y el doctor Rio, alcaldes de la casa y córte de su ma
otro de los jueces del Tribunal de San gestad, corregidores y otras justicias
gre, confrontando aquellos dictámenes ordinarias de sus reinos y señoríos de
sacando de ellos la mayoría, sin que Castilla y á cualquier dellos envsu ju
ios que los habian dado tuviesen el risdiccion ante quien por parte del fis
menor conocimiento de que pronuncia cal del consejo real de su dicha mages
ban una sentencia, mandó formar una; tad que reside en su córte de Castilla,
y queriendo guardar algunas aparien será presentada, como en la causa y
cias judiciales, hizo que su secretario pleito ante mí pendiente entre el pro
la leyese en su presencia y la del doc curador general de S. M. en estos sus
tor Rio, para que no se supiese por estados de Flandes, acusador de la una
ningun otro, disponiendo quedara en parte contra Flores de Montmoranci,
suspenso hasta que se declarase cuál señor de Montigny, ausente, preso en
era la voluntad del rey Felipe II, para el alcázar de la ciudad de Segovia, y
lo que le enviaba la sentencia y los pa su procurador en su nombre, reo acu—
receres que habia tomado, juntamente sado de la otra, sobre las causas y ra
con una requisitoria para que se le no zones en el proceso del dicho pleito
tificase á Montigny. contenidas; habiendo las dichas partes
Como el proceso se habia redactado alegado de su justicia, y siendo recibi
en francés, la sentencia se escribió en do el pleito á prueba con cierto térmi
el mismo idioma, y de ella mandaba una no, y habiendo hecho sus probanzas,
fiel traduccion. Decia al rey que cual asi por escripturas como por testigos,
quiera que fuese la resolucion que so y el pleito concluso: y visto el proceso
bre ello tomase le diera aviso con tes por algunos del consejo de S. M. des
timonio de lo que se ejecutase para po tos sus estados por mí nombrados para
derlo unir al proceso. el dicho efecto, y habiendo oido sus
Vemos, pues, aqui que en la causa votos y pareceres por escripto, firma
seguida en el Tribunal de Sangre con dos de sus nombres, fué por mí dada
tra el señor de Montigny, causa en que y pronunciada sentencia definitiva del
se oyeron solo las deposiciones de to tenor siguiente.
dos sus enemigos, en la que no se le
hizo comparecer, ni fué oida la de Traduccion del francés al castellano
fensa, como sucedió con los desgracia de la sentencia de muerte pronunciada
dos condes de Egmont y Horn, aun por el duque de Alba contra Montigny
que bien inútilmente porque ya estaban en 4 de marzo de 1570.
sentenciados desde el momento en que
fueron presos tan alevosamente, no se «Visto por el Illmo. y Excmo. Señor
observaron ninguno de los trámites Duque de Alba, Marqués de Coria, etc.,
judiciales. caballero de la órden del Tuson de Oro,
La sentencia del duque de Alba Mayordomo mayor de S.M., su goberna
pronunciada contra el señor de Mon dor, lugarteniente y capitan general
tigny, que se halla original en el ar— destos Estados, en su consejo cerca de su
chivo de Simancas, era del tenor si persona, el proceso criminal entre el
guiente: procurador general de su Magestad con
tra Flores de Montmoranci, señor de
Carta requisitoria (1) del duque de Montigny y de Leuza, caballero de la ór
den del Tuson de Oro, gobernador y gran
(1) , Archivo de Simancas,—Estado.—Le baylío de la villa de Tournay, Montagne
gajo 543, - y Sant Amand y Tournesis, preso de
FLORES DE MONTMORENC.Y. 231

tenido en España, reo; visto tambien Y así leida por mí el secretario infras-.
las informaciones y probanzas fechas cripto en presencia de su Excelencia
por el dicho procurador general, ins y consejeros que estaban, y pronun
trumentos y escripturas por él exhibi ciada por su dicha Excelencia el dicho
das, las confesiones del dicho preso mes y año. Por mandado espreso de
con sus defensas, instrumentos y es su Excelencia.—Joan Albornoz.
cripturas presentadas para su descar— Sacada del original en francés pa
go: vistas asimismo las culpas que re labra por palabra por mí J. de Al
sultan del dicho proceso de haber el di bornoz.
cho de Montigny cometido crímen laesae
Majestatis, y de rebelion: siendo cóm Llegó precisamente esta sentencia
º y principal instrumento de la cuando se hallaba el rey Felipe II, en
iga y conjuracion del príncipe de Sevilla, disponiendo el fausto suceso
Orange y algunos otros señores destos de su enlace con la princesa Ana de
estados: habiendo tambien el dicho reo Austria. No era seguramente la época
favorecido y sostenido los gentiles de derramar sangre ni la ocasion de
hombres confederados del compromi renovar las escenas terribles que se
so y de la requesta, y los malos oficios habian representado en los Paises Ba
que él ha hecho en la villa y ciudad de jos, y que habian escitado, no solo el
Tournay, siendo alli enviado por Ma horror de aquellas provincias, sino lla
dama la Duquesa de Parma que enton mado la atencion de las potencias es—
ces era Regenta y Gobernadora etc. de trangeras, que, como hemos visto, ha
los dichos Estados, para remediar los bian reclamado, aunque en vano, del
desórdenes y alborotos subcedidos en monarca español un sistema de mas
el dicho lugar contra la conservacion tolerancia y de conciliacion. No queria
de nuestra santa fé católica y defensa Felipe en aquella ocasion acrecentar
della con los sectarios sediciosos y re las murmuraciones y aumentar el dis
beldes de la santa iglesia apostólica gusto, aunque sordo, que se notaba en
romana y de S. M.: considerando asi tre las gentes del pueblo. Veia ademas
mismo todo lo que resulta del dicho que el reo á quien se condenaba al úl
proceso; habiendo su Excelencia ma timo suplicio, reo de elevadísima clase,
duramente deliberado sobre ello con los investido con las mas altas condecora
del dicho consejo y oido sus pareceres, ciones del Estado, y que habia presta
juzga conforme á los pedimentos del do grandísimos servicios en los ejérci
dicho procurador general y declara en tos y en la diplomacia, no habia sido
conformidad dellos el dicho de Montig oido y se le habia juzgado hallándose á
ny haber cometido crímenes laesae Ma inmensa distancia del sitio donde se le
jestatis y de rebelion, y como tal debe habia formado el proceso, y que su eje
ser esecutado por la espada y la cabeza cucion tendria mas el aire del deseo de
puesta en lugar público y alto, á fin concluir con una familia noble y pode
º ella sea vista de cada uno, á don rosa, como se habia hecho con el con
e quedará por tanto tiempo y hasta de de Horn, que de vengar los fueros
tanto que por su dicha Excelencia se de la justicia ultrajados y castigar la
ordene otra cosa: y esto por ejemplar rebelion de Tournay, acaecida precisa
castigo de los delitos y crímenes por mente cuando él se hallaba como em
el dicho de Montigny perpetrados: en bajador de las provincias flamencas al
cargando que persona no sea osada de lado de Felipe II.
la quitar de allí sin licencia espresa, Trataba, pues, de darle un bocado,
so pena del último castigo. Y declara como entonces se decia, es decir, un
todos y cualesquier sus bienes muebles veneno en la comida ó en la bebida pa
é inmuebles, derechos, acciones, feudos ra que fuese muriendo poco á poco y
y heredades de cualquier cualidad ó udiese disponer su alma como un en
condicion y en la parte donde ellos ermo, porque en medio de la crueldad
sean situados ó pudieran ser hallados, que se nota en el carácter de Felipe II.,
confiscados á provecho de su dicha Ma resplandecia siempre el mas ardiente
gestad. Asi proveido á 4 de Marzo 1570 deseo de la salvacion eterna de sus víc
estilo romano. F. A. Duque de Alba. timas.
232 CAUSAS CELEBRES

Fluctuando en lo que debia de ha mos visto en su época; asi, parecióle


cer con respecto á Montigny, dilató el al rey que se faltaria á la justicia si
contestar al duque de Alba hasta su no se cumplia lo que disponian sus
vuelta de Andalucía, y lo verificó en el prescripciones, y que era mucho mejor
Escorial el dia 30 de junio, que lo hizo que se ejecutase la sentencia en la
acusando al recibo de la copia de la forma que estaba dictada, dándole gar
sentencia contra el marqués de Ber rote en la cárcel; pero que se hiciese
ghes, R la requisitoria contra Montig con tan grande secreto y de tal for
ny.—Alabando el recato con que ha ma, que jamás pudiera conocerlo el
procedido el duque, le recomienda el mundo, apareciendo á los ojos de to
secreto hasta que él avise otra cosa (1). dos que habia muerto naturalmente,
Estraño contrastel Hipócrita respeto
Con vuestra carta de 18 de marzo á la justicial.....
recibí la copia de la sentencia del mar El casamiento de Felipe II se habia
qués de Berghes y la requisitoria para dispuesto precisamente que se verifi
la ejecucion de la que habiades pro case en la ciudad de Segovia, porque
nunciado contra la persona de Mon los desposorios habian tenido lugar el
tigny, y fué muy bien haberlo hecho 24 de febrero de 1570 en Spira por
en el modo y con el recato que decís poderes y á nombre del rey con don
para que se tuviese secreta hasta que Luis Venegas y Figueroa en presencia
yo lo supiese y os advirtiese de mi pa del emperador Maximiliano II.
recer y voluntad; porque, en efecto, Atravesó la reina los Paises Bajos,
aunque es asi que constando tan claro y si bien el rey no permitió que saliese
de sus culpas y delitos, en cuanto al de ellos el duque de Alba, á pesar de
hecho de la justicia no habia que parar haberle nombrado ya por su sucesor
mas de mandarla ejecutar luego que vi al duque de Medinaceli, vino acom
la dicha vuestra carta y requisitoria; pañando á la reina el hijo del de Alba
todavía por los embarazos del camino don Fernando de Toledo; desembarcó
¿ algunas consideraciones que me la régia comitiva en Santander en 3 de
an ocurrido, acordé de diferirla hasta octubre, precisamente el dia en que se
llegar aqui, y aun no estoy resuelto cumplia el año de la muerte de la an
cuándo ni cómo será; y asi es necesa terior reina Isabel de la Paz; de San
rio que allá en ninguna manera se pu tander vino la reina á Segovia, donde
blique la dicha sentencia de Montigny la esperaba Felipe II, y donde debian
hasta que yo os lo avise; mas en la de celebrarse suntuosamente sus bodas
Berghes no hay que parar, sino que el dia 12 de noviembre.
mandeis que luego se divulgue y eje No queria Felipe II tal vez que los
cute en la forma que la habeis pronun ayes del señor de Montigny, á quien
ciado si á vos no os pareciere otra cosa: iba á arrebatar la vida, viniesen á tur
y avisaréisme qué bienes suyos se apli bar los ecos alegres, los cánticos de
can á mi dominio con lo demas que cerca júbilo de su matrimonio, y dispuso que
desto os ocurriere, en carta aparte como fuese trasladado á la fortaleza de Si
va esta. mancas, para lo cual espidió la siguien
Del Escorial á último de junio 1570. te real cédula á don Eugenio de Peral
ta, alcaide perpétuo de la fortaleza y
Continuaba indeciso aun como se hombre de cuya reserva y fidelidad es
ve por esta carta el parecer Felipe II. taba seguro, para que lo trasladase á
sobre la resolucion que debia de tomar á aquel punto. -

en el proceso de Montigny. Decia asi este mandato (1).


Era muy particular el carácter de
Felipe II, como habrán podido ir ob EL REY.
servando nuestros lectores en el dis
curso de las causas célebres que he Don Eugenio Carrillo Ramirez de
Peralta nuestro alcaide de la fortaleza
(1) , Está toda en cifra, y se ha copiado del
original que se halla en el archivo de Siman (1) Original en el archivo de Simancas en
cas entre los papeles de Estado, núm. 644. tre los papeles de Estado, legajo 543.
FLORES DE MONTMORENCY. 233
=== -

de Simaneas. Por cuanto á muestro ñor de Montigny de la fortaleza de Se


servicio, conviene que Flores de Mont govia, y escediéndose de las órdenes que
morenci, señor de Montigny, Caballe habia recibido del mismo monarca,
ro de nuestra órden del Tuson de Oro, mandó ponerle grillos para mayor se
que al presente está preso en los nues guridad.
tros alcázares de Segovia, sea llevado Grande fué la impresion que causó
á la dicha nuestra fortaleza de Siman aquel duro tratamiento en el magnate
cas; habemos querido que vos, como flamenco; veíase tratado como el mas
nuestro alcaide della, y de quien hace vil plebeyo, como el último de los cri
mos toda confianza, vais con esta co minales, y aquel hombre que llevaba
mision. Y asi os mando que presentan en su pecho las insignias soberanas del
do al conde de Chinchon, nuestro al Toison de Oro, no podia mirar sin in
caide de los dichos alcázares de Sego dignacion , sus pies cargados con el
via, que al presente está aqui como hierro de los malhechores y de los mas
sabeis, una cédula nuestra que con es viles criminales.
ta se os dará para que su teniente os El sentimiento que le causó la afren
entregue la persona del dicho de Mon ta que tenia que devorar, tal vez la
tigny, vais á la dicha ciudad y llevan prevision de la suerte que le espe
do con vos los dos alguaciles de nues raba en la traslacion al castillo de Si
tra casa y córte que para este efecto mancas y de triste y de fatídica me
se han nombrado, y seis arcabuceros, moria, donde habian perecido años an
ó mas si os pareciere que será menes tes el obispo Acuña, Pimentel, Maldo—
ter, tomareis á vuestro cargo la per nado y el mariscal de Navarra, hicie
sona del dicho Montigny y haciéndole ron que se acrecentase la indisposicion
poner en un carro, yendo vos mismo que ya padecia en Segovia.
con él juntamente con los dichos al Llegado á Simancas, por una coin
guaciles y arcabuceros, le llevareis á cidencia particular, fué colocado en
la dicha fortaleza de Simancas, donde el cubo, que se llamaba del Obispo.
le porneis y hareis tener preso y á Nuestros lectores, que conocen la cau
buen recaudo, con ocho hombres de sa de don Antonio Acuña, saben por
confianza para su guarda, los que vos qué se habia dado este nombre á aque
quisiéredes tomar; á cada uno de los lla habitacion del castillo. Alli era don
cuales mandaremos pagar y librar cua de habia vivido tantos años aquel pre
tro reales al dia por el tiempo que nos lado; alli donde habia sufrido el tor
sirvieren en esto, conforme y de la mento, por lo que se le habia dado el
manera que se pagaban á los ocho que nombre de Cubo del Obispo, nombre
le guardaban en Segovia; y teniendo que aun hoy dia conserva y en el que
asi preso y en buena custodia al dicho nosotros hemos estado.
de Montigny, no le soltareis ni permi Ya en Simancas, don Eugenio de
tireis salir de la parte y lugar qne en Peralta trató de dulcificar en lo posible
la dicha fortaleza le pusiéredes, de dia la prision de su ilustre huésped. Le
y noche, en sus pies ni en agenos ni permitia salir á comer á un corredor,
en otra manera alguna, hasta que por algunas veces paseaban juntos algunos
Nos se os mande: que asi cumple á ratos por una sala. Aproximábanse las
nuestro servicio. Fecha en Madrid á bodas del rey. El 3 de octubre habia
17 dias del mes de agosto del año de desembarcado, como hemos dicho, la
1570.—Yo EL REY.—Por mandado de futura reina en las playas de Santan—
S. M.—Gabriel de Zayas. der, donde habia sido recibida en me
dio de la alegría mas universal. Mien
Al mismo tiempo hizo venir de Se tras conducian á los brazos de Felipe,
villa á don Alonso de Arellano, á quien tres veces viudo á la edad de cuarenta
nombró alcalde de córte y del crímen y tres años y medio, á la princesa Ana
de la chancillería de Valladolid, perso de Austria, que habia sido prometida á
na que juzgaba muy propia para la su hijo, jóven aun de veinte y cinco
ejecucion del designio á que se habia años, nacida en la ciudad de Cigales,
decidido. el monarca español, al par que dicta
Don Eugenio de Peralta sacó al se ba las medidas y los preparativos de
30
234 CAUSAS CELEBRES
=e

fiesta para recibir á aquella hermosa tregareis: que haciéndolo asi y cum
jóven, disponia con la mayor frial pliendo lo que por esta nuestra cédula
dad los medios de verificar el supli os mandamos, os damos por libre y
cio del conde de Montigny. quito de cualquier ¿ y obligacion
El dia 1.º de octubre, cuando esta en que por razon de la dicha guardia y
ba Felipe II disponiendo con la minu custodia del dicho Flores de Montmo
ciosidad propia de su carácter, y es rency vos teníades ó podíades tener,
cribiendo de su pnño hasta los meno y si necesario es os alzamos cualquier
res detalles de la etiqueta con que ha pleito homenage, juramento é promesa
bia de recibirse á la reina en Segovia, que en la dicha razon hayais hecho, y
dictaba con , no menos sangre fria y os damos por libre y quito de ello para
minuciosidad hasta las mas pequeñas que agora ni en ningun tiempo no os
circunstancias con que debia hacerse pueda ser en la dicha razon por esta
la ejecucion de muerte de Montigny, y causa pedido ni demandado cosa al
tomaba las mas esquisitas precaucio guna: y otro, si hereis, guardareis y
nes para que quedase ignorada del cumplireis lo que el dicho alcalde don
mundo aquella muerte, revistiendo to Alonso de Arellano en lo tocante al
das sus circunstancias de modo que dicho negocio y en la forma y órden
apareciese el fallecimiento de su prisio que en él se ha de tener, y en todo lo
nero como efecto de una enfermedad. á ello annexo y dependiente en cual
Espidió para el alcaide de Simancas quier manera, os ordenare y mandare
don Eugenio de Peralta esta real cé de nuestra parte: que cumpliéndolo y
dula para que se entregase á don Alon guardándolo asi, os relevamos de cual
so de Arellano, á el que habia ya lle quier cargo y culpa que por esta razon
ado de Sevilla para desempeñar su os quiera ser puesto é imputado. Fe
¿ de la real chancillería de Va cha en el Escorial á 1.º de octubre de
lladolid, la persona de Montigny para mil quinientos setenta años.—Yo EL
¿ hiciese de él lo que llevaba enten REY.—Por mandado de S. M.—Martin
de Gaztelu.
ido (1).
EL REY. Al entregar al alcalde Arellano la
real provision que ponia á su disposi
Don Eugenio Peralta, alcaide de cion á Montigny, despues de concer
nuestra fortaleza de Simancas. El li tar con él de palabra los medios de
cenciado don Alonso de Arellano, al ejecucion, le dió por escrito las ins
calde de la nuestra chancillería que trucciones siguientes, documento no
reside en la villa de Valladolid, os di tabilísimo que original existe en el ar
rá y comunicará de nuestra parte lo chivo de Simancas antre los papeles de
que le habemos ordenado cerca del Estado y número 543, documento dic
cumplimiento de la carta requisitoria tado por el rey á su secretario Ve
uel duque de Alba nuestro Goberna lasco.
or y Capitan General en los nuestros
Estados de Flandes ha enviado dirigi La órden que el Señor Licenciado
da á las justicias destos reinos sobre lo don Alonso de Arellano, alcalde de la
tocante á Flores de Montmorenci, se Audiencia y Chancillería de Valladolid
ñor de Montigny, caballero de la órden ha de tener y conviene que guarde en
del Tuson de Oro, que al presente es— el cumplimiento y ejecucion de lo que
tá preso en esa dicha fortaleza de Si S. M. le ha cometido en el negocio de
mancas, y cuya guardia y custodia es Flores de Montmoranci, señor de Mon
á vuestro cargo. Y porque para el efec tigni, caballero de la órden del Tuson
to y cumplimiento de lo quel dicho al de Oro, que al presente está preso en
caide ha de hacer es necesario que vos la Fortaleza de Simancas, es lo si
le entregueis la persona del dicho Flo guiente:
res de Montmorenci, se la dareis y en Primeramente al dicho Señor Li
cenciado don Alonso de Arellano se le
(4) Original en el archivo de Simancas en han dado y entregado la sentencia ori
tre los papeles de Estado, núm. 543. ginal quel Duque de Alba, gobernador
*.

FLORES DE MONTMORENCY. 235


e

capitan general en los Estados de capítulo precedente, que en ninguna


ándes dió contra el dicho Flores de manera querria se entendiese quel di
Memoranci, en la cual entre otras pe cho Flores de Memoranci ha muerto
nas le condepnó á muerte natural: la por ejecucion de justicia sino de su
cual sentencia original está escrita en muerte natural, y que asi se diga y
lengua francesa, que fué dada en Bru publique y entienda, para lo cual será
selas á cuatro de Marzo deste presente necesario proceder con gran secreto, y
año de quinientos y setenta; y con la usando de la disimulacion y , forma de
dicha sentencia original en francés se que se le advierte aparte y de palabra
le dió y entregó juntamente una copia se le ha comunicado, segun lo cual
ó transumpto auténtico della en len conviene no se dé parte ni intervenga
gua española, y asi mismo se le ha en este negocio mas personas de las que
dado y entregado una carta requisito precisamente para ello fueren necesa
ria quel mismo Duque dió dirigida á rias y á aquellas se les debe de encar
los alcaldes y justicias destos reinos, gar grandemente el secreto en tal ma
inserta en ella la dicha sentencia en nera que esto quede cuanto en el mun
lengua francesa, para que las dichas do sea posible asegurado.
justicias la ejecutasen en la persona Sobre los dichos presupuestos par
del dicho Flores de Memoranci, y la tirá de aqui el Señor Licenciado don
dicha requisitoria es dada en la dicha Alonso luego y podrá irse luego á la
villa de Bruselas á diez y ocho de Mar villa de Valladolid previniendo al di
zo deste dicho presente año. Hásele cho don Eugenio de Peralta para que
dado juntamente con esto una cédula le espere y aguarde en el Abrojo al
de S.M. en que se le manda guarde tiempo quel dicho don Alonso por alli
y cumpla lo contenido en la dicha car— hobiere de pasar, donde tratará y co
ta requisitoria conforme á lo que en municará con él muy particularmente
ella se contiene, y al requirimiento y todo el discurso y órden de lo que se
pedimento que sobresto se le ha hecho ha de hacer dándole la cédula de S. M.
lleva otra cédula de S. M. para don que para él lleva y mostrándole la su
Eugenio de Peralta, alcaide de la forta ya, y la dicha sentencia y carta re
leza de la villa de Simancas, para que quisitoria que lleva y esta instruccion
le de y entregue la persona del dicho y el advertimiento que lleva y trata
Flores de Memoranci y para que asi rá y concertará con él muy puntual
mismo guarde y cumpla lo quél le or mente lo que se habrá de hacer, y el
denare: las cuales dichas sentencias y tiempo y la forma y hora y todas las
carta requisitoria y cédula á él dirigi otras cosas qne han de preceder á la
da tendrá y guardará en su poder jun dicha ejecucion, y en ella y despues
tamente con los autos que en el cum se han de hacer; y que i, eSt. O S62
plimiento de lo que le es cometido se ordene de manera que se consiga el fin
hicieren y pasaren hasta tanto que por que S. M. quiere que se tenga, ques
S. M. le sea ordenado lo que de todo hacerse en efecto la ejecucion de la
ello hobiere de hacer. justicia con la dicha disimulacion y se
Y como quiera que conforme á lo Cret, O.
contenido en la dicha sentencia y car— Hecho lo susodicho y dejando con
ta requisitoria la ejecucion de la jus certado y asentado con el dicho don
ticia en la persona del dicho Flores de Eugenio todo lo que se ha de hacer pa
Memoranci se habia de hacer pública sará á Valladolid, donde llegado y ha
mente y con pregon y en la forma que biendo tomado la posesion de su oficio
en ello se dice; pero S. M. por algunas comunicará al Presidente de aquella
justas consideraciones que á ello le Audiencia la comision que lleva, al
mueven, es servido y quiere que la di cual se escribe particularmente para
cha justicia se haga secretamente y que si fuese necesario ayudarse dél en
dentro en la dicha fortaleza, de mane algo, especialmente por lo que toca al
ra que cumpliéndose con el efecto la religioso que habrá de ir y á los oficia
demas forma y publicidad se escuse. ler forzosos que habrá de llevar, aun
Y en tal manera es la voluntad de quel dicho Presidente por ser el no
S. M. que se guarde lo contenido en el gocio criminal y dosta calidad no poº
236 CAUSAS CELEBRES,

drá intervenir en él, todavía es bien diligencias de manera que en esto que
que lo sepa, y para lo que toca al di tanto importa no haya descuido, ni se
cho religioso y oficiales será conve le deje de ayudar, asi en el dicho
niente. tiempo que se le dará como en lo
En lo que toca al tiempo y hora demas.
quel dicho Señor Licenciado don Alon Pasada la media noche una ó dos
so de Arellano ha de ir á la dicha for horas segun que entendieren será me
taleza de Simancas para el efecto de jor para que haya tiempo para volver
la ejecucion, y en la forma que esto se se el dicho Señor Liaenciado antes del
hará, entre él y dicho don Eugenio se dia á su casa de Valladolid, se podrá
podrá mejor concertar para que se hacer la ejecucion de la justicia estan
guarde el secreto y la disimulacion; y do presentes el religioso ó religiosos
á lo que acá de presente ocurre pare que han de asistir para que le ayuden
ce que seria bueno que partiese de á bien morir, y el dicho don Eugenio
Valladolid una víspera de fiesta, tarde, de Peralta y el escribano, y la perso
de manera que llegase á Simancas un na que ha de hacer la ejecucion, y si
rato de noche, llevando consigo tan so pareciere necesario y conveniente otra
lamente un escribano de confianza y ó otras dos personas de confianza que
la persona de que ha de usar para la ayuden y asistan; y háse de advertir
ejecucion de la justicia, y con los me mucho que la ejecucion se haga en tal
nos criados que fuere posible, y que manera que cuanto sea posible los que
para aquel tiempo el dicho don Euge le hubieren de amortajar despues de
nio tenga prevenido el lugar y parte muerto, no habiendo de ser de los que
or donde han de entrar en la dicha se hallaren presentes, si pareciere que
ortaleza y en donde han de estar en que será bien que lo hagan otros para
ella para que sea con todo secreto, y mas disimulacion, no conozcan haber
que luego en llegando entren , en el sido muerte violenta: la particularidad
aposento donde el dicho Flores de Me de lo cual y la forma se puede mal ad
moranci estuviere, donde el en pre vertir de acá y asi allá se podrá mejor
sencia del dicho don Eugenio y con prevenir.
otras una ó dos personas de confianza El religioso que hobiere de inter
y por antel escribano que llevará, no venir y asistir en este negocio para lo
tifiquen la dicha sentencia y carta re de su ánima, conviene que sea perso
quisitoria y el aucto del requerimiento na muy ¿ prudente, y que va
que aqui se le ha hecho por el fiscal ya prevenido de la sospecha y poca se
con su acetamiento y se asiente todo guridad que se tiene de la persona del
por auto; y hecha la dicha notificacion dicho Flores de Memoranci en lo de la
y dejando prevenido todo lo necesario fee, para que conforme á esto le pro
para quel dicho Flores de Memoranci cure encaminar y guiar, y de apartar
no pueda hacer en su persona, ni pue le de los errores ó malas opiniones en
da acaecer ningun mal recaudo, y ha que hobiere estado ó estuviere, tra
biéndole él y el dicho don Eugenio con tándolo con la prudencia y buen modo
fortado, consolado y animado con to que conviene y él sabrá mejor hacer el
das las buenas palabras que ser pudie cual religioso le confesará y él verá si
re, le dejen con el religioso ó religiosos se le debe dar el Santísimo Sacramen
que han de asistir con él conforme á lo to porquesto forzadamente se habrá de
que de suyo se dirá. dejar á lo quél juzgare convenir.
Hecho lo que está dicho en el pre Este religioso parece que se ha de
cedente capítulo, parece que por aque llevar de la villa de Valladolid, y por
lla noche y todo el dia siguiente que lo que acá se ofrece parece que seria
será fiesta, y hasta pasada la media no á propósito Fray Hernando del Castillo
che adelante parece que se podrá dife questá en el colegio de San Pablo ó
rir la ejecucion para que el dicho Flo otro de aquella calidad de la misma
res de Memoranci tenga mas tiempo órden ó de Sanc Francisco, segun pa
para se confesar y recibir los Sacra recerá al Presidente con quien esto se
mentos si pareciere, y para se conver ha de comunicar, el cual le mandará
tirá Dios y arrepentirse y hacer sus llamar y le encargará mucho este ne
FLORES DE MONTMORENCY. 237

gocio por lo que toca á la ánima y tendiéndose que ha sido por ejecucion
juntamente con ello el secreto como de justicia, se dará órden en lo que
uiera que este religioso no se po— toca á su entierro que ha de ser en la
rá escusar que lleve un compañero iglesia de la misma villa de Simancas
ara que le ayude, especialmente ha ¿ via de depósito, y hacerse há pú
¿ de decir misa, y porque tan licamente con pompa moderada y
tas horas no podrá asistir solo un reli conforme á la forma y órden que á
gioso; pero con el mismo se podrá pre personas de su calidad se acostumbra,
venir el secreto del compañero. poniéndole en depósito en lugar que
Si el dicho religioso irá juntamen sea decente con su tumba, y diciéndo
te con el Señor Licenciado don Alonso le su misa cantada y vigilia y otras
ó antes segun la traza y designo que misas rezadas en número competente
se diere para lo de la disimulacion; y por agora, que despues se verá lo que
si convendrá que yendo antes aunque se debe de hacer; y no será inconve
no haya llegado el señor Licenciado ni niente que se dé luto á sus criados
se le haya notificado la sentencia co— pues son pocos: y para lo uno y para
mience á tratar con el dicho Flores de lo otro se proveerá del dinero necesa
Memoranci y le signifique lo que ha rio en caso que no lo haya en su poder.
de ser; esto se tratará y verá entrel Y aunque en lo que toca al secreto y
dicho Señor don Alonso y don Euge disimulacion, y á la forma que pares
nio, y tambien lo podrá comunicar con ce que en esto se puede tener se ad
el Presidente pues en cuanto á esto po vierte en los capítulos deste memorial
drá bien intervenir. y en lo que de palabra se ha dicho
Si el dicho Flores de Memoranci aparte, y se escribe á don Eugenio de
quisiese ordenar testamento no habrá Peralta lo que acá ha ocurrido, esto no
para que darse á esto lugar, pues sien se entiende en cuanto á la forma, tan
do confiscados todos sus bienes y por preciso, que si allá les ocurriese otra
tales crímenes, ni puede testar ni tie mejor y con la cual se consiguiese el
ne de qué: empero si todavía quisiere fin que se pretende del dicho secreto
hacer alguna memoria de deudas ó y disimulacion podrán usar de ello.
descargos se le podrá permitir como Fecha en la ciudad de Segovia á
en esto no se haga mencion alguna de primero de octubre de mil quinientos
la justicia¿ que se hace, si setenta años.—El Doctor Velasco.
no que se ha hecho como memorial de
hombre enfermo y que se temia morir; Imposible es no estremecerse de
ni se le ha tampoco de permitir escri horror al ver el frio cálculo con que se
bir cartas ni hacer otro género de es— pesan todas las circunstancias de este
criptura, si ya no la escribiese en la asunto, el disimulo cruel que reina en
forma dicha como enfermo y que se estas instrucciones dadas por el rey
teme morir y con palabras que no en momentos en que el ánimo debia
traigan inconveniente sobre presu de estar mas dispuesto á la piedad, y
puestos questas y otras cualesquier en ocasion en que siempre los reyes
escripturas suyas se han de tomar y han solido ejercer, aun para los mas
no se han de dar ni publicar sino las culpables, la mas bella de sus prero
que pareciere que sin inconveniente se gativas, la clemencia.
puede hacer. Todos los bienes quel di Salió de Segovia el alcalde don
cho Flores de Memoranci tuviere, asi Alonso Arellano, con su sentencia ori
dineros y joyas y si entrellas hobiere ginal de muerte que habia dictado en
el collar del Tuson de Oro, y papeles Bruselas el duque de Alba contra Mon
y escripturas, como otras cualesquier tigny, la cédula real, y las instruccio
cosas que se hallaren suyas, se pon nes del rey, y se fué á tomar posesion
drán por inventario y á recaudo y se de su nuevo destino en Valladolid.
avisará á S. M. para que mande lo que Ninguno podia sospechar la terrible
ello se ha de hacer. mision que llevaba, mision parecida
Hecha la dicha ejecucion y habién á la que antes habia desempeñado en
dose publicado su muerte que ha de el mismo Simancas el alcalde don Ro
ser con la dicha disimulacion y no en- drigo de Ronquillo que tambien habia
238 CAUSAS CELEBRES.
--3

venido de Sevilla para ajusticiar al cibiesen de ello sus fieles criados. Im


obispo de Zamora don Antonio Acuña. posible era conservar el misterio que
Entonces Cárlos V, si bien atropellan exigia el rey en la ejecucion, y mucho
do y conculcando todas las formas del menos hacerla pasar á los ojos del
procedimiento, obra á la luz del dia, mundo como una muerte natural.
públicamente, arrostrando el juicio del El veneno hubiera podido servir
mundo sobre sus actos, y en época para esto, empero Felipe II queria una
tambien, para que sea mas completa la ejecucion judicial, en toda regla, he
semejanza, en que iba á celebrar sus cha por la mano del verdugo, previa
bodas con la infanta Isabel de Portu solemne notificacion, y en presencia
gal, ahora su hijo Felipe II en la época del juez, y dando al reo los auxilios y
misma de su matrimonio con la archi consuelos que presta la religion en tan
duquesa Ana de Austria enviaba á otro terrible trance.
alcalde á Simancas á matar á un hom Felipe II queria la observancia de
bre, pero silenciosa, calladamente, con todas las fórmulas, pero queria sepul
virtiendo la espada santa de la justicia tar en el silencio el suceso, y que lo
en el puñal de un asesino, y ocultan ignorase el mundo. Necesitaba poner
do al mundo su accion, si bien por una en el secreto á algunos, empero estos
de esas circunstancias tan propias en eran los mas precisos, los que inter
su carácter hipócrita, rodeándose para venian como actores indispensables
ello de todo el aparato que usa la jus en la ejecucion, é interesados por lo
ticia para producir el saludable escar mismo en el misterio, y en quienes
miento que es el fin principal de toda podia obrar la amenaza de muerte en
pena, y que no puede obtenerse sino caso de una indiscrecion. No se halla
con la publicidad. ban seguramente en ese caso los cria
Llamó el alcalde don Alonso de Are dos, afectos á su buen señor y que por
llano al Abrojo á don Eugenio Peralta, cerca de tres años habian voluntaria
alcaide de Simancas, le entregó la real mente compartido con él todas las pe
cédula de Felipe II, por la que manda nalidades de una estricta prision.
ba pusiese á su disposicion la persona Muerto su señor, hubieran salido
de Montigny, y le enteró del objeto del de su encierro unos para Flandes, otros
rey, dándole la lectura de sus instruc para Alemania, y alli podian revelar lo
ciones. que tanto importaba ocultar á Feli
Con asombró oyó Peralta al alcalde pe II que como veremos despues se
Arellano, veia la cédula real, veia las proponia hacer juzgar en Bruselas al
instrucciones de Felipe II, y aunque señor de Montigny como muerto, co
no podia dudar de la voluntad termi mo habia hecho con el marqués de
nante del rey, no veia el medio de ob Berghes.
servar el profundo misterio de que Largo tiempo discurrieron el alcai
queria rodeárse aquella terrible eje de Peralta y el alcalde Arellano para
cucion. encontrar el medio de ejecutar lo dis
Las palabras de Felipe II eran ter puesto por el rey.
minantes: que en ninguna manera que Acordaron fraguar un escrito en la
ria que se entendiese que el dicho Flo tin y dejarlo cerca del aposento en que
res de Memoranci ha muerto por ejecu se hallaba Montigny, en el que se su
cion de justicia, sino de su muerte na pusiese un proyecto de fuga, y como
tural, y que asi se diga, publique y en respuesta á inteligencia con gentes de
tienda. afuera, y con este motivo estrechar la
Era para esto preciso separarle de prision del desgraciado prisionero, re
su servidumbre, de su mayordomo, de duciéndolo á estar encerrado en su
sus dos pages Antonio de Segovia y cuarto, quitándole sus fieles criados á
Alonso de Herrera, de Juan de Horni y pretesto de que eran los cómplices en
de Lope de Palacios que habian consen la proyectada fuga.
tido en encerrarse con él en Segovia y Calcularon que aquel proceder afec
ue para servirle habian sido traslada taria á un hombre ya enfermo, y, se
os con él á Simancas. No podia morir propusieron que á la mas leve indis
el señor de Montigny sin que se aper posicion que sufriese en su ya que-.
FLORES DE MONTMORENCY. 239
-
•w

brantada salud, se exageraria la noti por acostumbrado que estuviese al


cia del mal entre las gentes del casti lº
aquel digno servidor de Fe
llo, y del pueblo, poniendo en últi 1pe 11.
mo caso en la confianza al médico que Era ya cerca del anochecer, y al
habia sido de la reina doña Juana, el li acompañar al señor de Montigny á en
cenciado Luis Fernando de Tordesillas, trar en el aposento donde moraba, re
acordando despues de ver el efecto paró en un papel que habia en el sue
¿? causaba lo proyectado, fijar el dia lo, el que recogió con la mayor pron
e la ejecucion, que deberia ser muy titud el alcaide.
en breve, y dirigiendo al rey una car— Este era el papel que se habia con
ta con tiempo el alcaide de la enferme venido, escrito en la conferencia del
dad que iban á suponer en Montigny, Abrojo, cuyo papel que se conserva
para que al dar la noticia de su muer tambien en el archivo de Simancas era
te como natural pudiese el rey mos el siguiente:
trarla á quien le conviniese y hacer
mas verosímil el suceso.
A. M. M. D. M.
Repugnante es el espectáculo que
presentaba un magistrado, el encarga
do de proteger la inocencia y castigar Noctu utintelligo nullus est tibi
los delitos, meditando con un caballe evadendi locus: interdiu saepe, ut
ro principal como el alcaide de Siman qui solus cum solo podagrico cus
cas un proyecto de fuga calumnioso
para vejar al infeliz preso en sus últi tode restas, qui tibi tan valido nec
mos momentos, y preparar en silencio viribus, nec cursu par erit. Erum
su muerte por mano del verdugo, sin pe igitur ab octavo usque ad duo
que se apercibiese el mundo de lo que decimun octobris quaqunque potue
el rey tenia como un acto de jus
ticia. -
ris horà, et prende viam contiguam
Separáronse don Eugenio Peralta y illi portae Castelli qua ingresus es.
don Alfonso de Arellano el dia 4 de oc Prope invenies Robertum et Joan
tubre, aquel para poner en planta su nem, qui tibi presto erunt equis
infernal proyecto, y este para buscar et aliis omnibus necesariis. Faveat
á fray Fernando de chi, de la ór
den de Santo Domingo, residente en Deus captis.—R. D. M.
el convento de San Pablo de Vallado
lid, hombre muy cuerdo y docto, y Aunque este poco elegante latin
que era el que recomendaba el rey en que da una pobre idea de los conoci
sus instrucciones, en primer lugar, pa mientos en humanidades del alcaide
sa asistir al señor de Montigny en sus don Eugenio de Peralta, y del alcalde
últimos momentos. don Alfonso de Arellano, es casi inte
Volvió á Simancas el alcaide don ligible aun para los estraños á este idio
Eugenio de Peralta. Encontró á Mon ma damos su traduccion.
tigny mas animado que nunca con la
esperanza de que con la próxima boda A. M. M. D. M.

del rey Felipe II, y con el aparente as


ecto de tranquilidad que presentaban No se sabe lo que significan estas
os negocios de Flandes, podria obte iniciales.
ner su libertad. Creia tanto mas en Entiendo que por la noche no tie
ello este desgraciado, cuanto que veia nes lugar para escaparte; muy frecuen
las delicadas atenciones que con él ob— te durante el dia: como que permane
servaba el alcaide, el que aquella mis ces solo con un solo guarda gotoso que
ma tarde segun su costumbre estuvo no vale tanto como tú ni en fuerza ni
paseando con él por los corredores del en agilidad para correr. Escapa pues
castillo, y hablando de cosas muy in desde el ocho al doce de octubre á
diferentes, no notando el desgraciado cualquier hora que puedas, y toma el
prisionero la preocupacion que natural camino contiguo á la puerta del casti
mente debia reinar en su semblante llo donde está la entrada. Cerca halla
20 CAUSAS CELEBRES.

rás á Roberto y Juan que te auxiliarán llo eran testigos los criados de Montig
inmediatamente con caballos y todo lo ny, los suyos propios, todo el pueblo,
demas necesario. Proteja Dios á los y el mismo prisionero á cuya buena fé
presos.—R. D. M. apelaba: lamentábase hipócritamente
en esta carta de que le hubiese pagado
Se ignora lo que quisieron signifi mal su buena voluntad, porque ha
car con estas iniciales que figuran ser ciendo grandes demostraciones de es
la firma de este documento fraguado tar contento y confiado en la justicia
de la manera que hemos visto. de su causa con la esperanza d obte
En vano mostró Montigny, la sor ner la real clemencia de S. M., habia
presa propia de la inocencia. Don Eu hallado indicios seguros de querer huir
genio de Peralta manifestóse resentido se de la prision, lo cual habia descu
con él: le echó en cara que tratase de bierto por un papel qne se habia en
comprometerle con su fuga, y que al contrado en el corredor de la casa jun
mismo tiempo correspondiese tan mal to á la sala, y tambien por un informe
á la confianza con que le habia tratado, que habia tomado de ciertos hombres
mostrándole que desde entonces se ve que en hábito de frailes cartujos ha
ria precisado á hacer mas estrecha su bian venido á reconocer aquella forta
prision, y no dejarle salir de la estan leza; que en vista de esto y con los
cia que se llamaba el cubo del Obispo. urgentes indicios que habia de que te
n caballero, un hombre de la no nia tratada su fuga con gente de afue
bleza y del pundonor de Montigny se ra, por mirar por su honra, y por dar
irritó al verse asi tratado por aquella al rey la cuenta que debia de su per
causa; al ver que aquel hombre no da sona le habia colocado en el cubo del
ba fé á sus palabras que llevaban to Obispo, le habia quitado los criados
do el acento de la conviccion de la que alli tenia, porque de la informa
inocencia, y al verse separado de sus cion que habia tomado resultaban sos
fieles criados y reducido al estrecho pechas contra algunos de ellos, que le
recinto del cubo del Obispo, se vió habia puesto al cuidado del teniente
acometido de un accidente de pena. de alcaide y de un criado suyo, hom
Era precisamente lo que habian calcu bre de confianza.
lado el alcaide Peralta y el alcalde Decia al rey que por este proceder
Arellano. se habia incomodado mucho con él,
Don Eugenio de Peralta escribió en haciendo grandes protestas de que no
tonces al rey con fecha de 10 de octu tenia la menor parte ni arte en aquel
bre la carta en que habian convenido suceso, y que si algo se hubiese hecho
tambien en la conferencia del Abrojo, habia sido sin su conocimiento ni no
dándole parte de como habia encerrado ticia: se habia afectado tanto que co
á Montigny en el cubo del Obispo por mo se hallaba convaleciente todavía de
haber tratado de huirse. la enfermedad que habia tenido en Se
En esta carta, escrita espresamen govia, y de que habia tenido una lige
te para que pudiese mostrarla el rey ra recaida á los dias siguientes de su
y sirviese de preparacion á la que en llegada á Simancas, y se le habia au
breve debia de seguir anunciando su mentado la calentura que, segun de
muerte, decia el alcaide Peralta que cian los médicos, añadia la carta, era
desde el dia en que habia recibido la de ruin especie. -

ersona del señor de Montigny en su Concluia la carta ofreciendo al rey


ortaleza le habia tratado con el mayor que tendria cuidado de todo lo que
respeto y regalado con cuanto le habia fuese necesario para su salud, con tal
sido posible; que le habia dejado an que no fuese con peligro suyo, ni de
dar por toda la fortaleza, comunicar jarle salir á tratar con la libertad que
con todo género de personas, y procu antes solia con las gentes, y remitia
rar el entretenimiento que podia pro copia del escrito en latin que se halló
porcionarle para que olvidase las pe cerca del aposento de Montigny.
nalidades de su prision, porque habia Escrita esta carta con el objeto que
entendido que en la instruccion del hemos manifestado, confió el alcaide
rey asi se le prevenia, y que de aque el negocio al médico de Simancas para
FLORES DE MONTMORENCY. 24
=

que entrase y saliese en la fortaleza ticia y de la sentencia mandando que


como que iba á curar al señor de Mon no se hiciese en público sino en secre
tigny, haciendo traer medicinas como to por su honor, y que se diese á en
si estuviese enfermo de una gran ca tender que habia muerto de la enfer
lentura contínua, y publicando que medad que le tenia en la cama.
era de tan mala especie, que no pasa Despues de aquellas palabras man
ria del dia sétimo, como asi fué. dó el alcalde al escribano que notifi
El dia sétimo era el lunes M6 de case la sentencia que traia, y éste le
octubre, y habíase combinado todo pa yó literalmente la sentencia que habia
ra que se verificase en aquel dia la mandado desde Bruselas el duque de
ejecucion de la sentencia. Asi fué que Alba, y que ya conocen nuestros lec
el sábado 14 por la noche entró en Si tores por haberla insertado literal
mancas como por casualidad el padre mente.
fray Hernando del Castillo, de la órden La sorpresa, la admiracion se pin
de Santo Domingo, á quien el alcaide taron en el rostro del infeliz Montig
envió á llamar con el objeto ostensible ny. Vivia tan descuidado de lo que iba
de que fuese á confesar al señor de á sucederle, cogióle tan de improviso
Montigny, cuya enfermedad se habia aquella medida, que le era hasta des
agravado. conocida la sentencia que contra él
Habian entrado antes como á cosa habia pronunciado el duque de Alba.
de las diez de la noche, ocultos con las Hemos visto que si tal sentencia hu
sombras de ella, encubiertos, y sin bo no solamente no tuvieron conoci
que nadie los viese, tres personas en el miento de ella los mismos jueces por
castillo de Simancas: eran el alcalde de quien aparecia pronunciada, sino que
la chancillería, don Alonso de Arellano; se habia mandado rodeada del mayor
el escribano de la cámara y del crímen misterio y con el mayor sigilo al rey
de la misma, Gabriel de San Estéban, Felipe II.
y el verdugo. Tan al contrario de la improvisa
Entró en el cubo del Obispo el al muerte que le amenazaba, se lison
calde y el escribano. En aquella re jeaba que con la venida de la nueva
ducida estancia estaba echado en la reina se dulcificarian tal vez los rigo
cama un caballero: aquel caballero era res de su prision, y confiaba en su ino
Flores de Montmorency, señor de Mon cencia de que tal vez obtendrian su
tigny. libertad. Asi su alteracion fué por mo
En aquella misma estancia.... años mentos creciendo. No podia persuadir
antes otro alcalde de córte habia ido se de lo mismo que oia; parecíale im
tambien á cumplir igual mision con un posible que un rey tan religioso qui
prelado que se hallaba tambien en la siese llevar á efecto una sentencia en
cama enfermo; habia ido á intimar la que no habia sido oido, en la que no
el alcalde Ronquillo la sentencia de se le habia hecho cargo ninguno, en la
muerte al obispo de Zamora, don An que hallándose preso y á distancia del
tonio Acuña, como entonces iba el al sitio donde se le habia seguido la cau
calde Arellano á intimar la sentencia sa solo se habia oido á sus émulos y á
de muerte al señor de Montigny. sus enemigos.
Habló algunas palabras don Alonso Afectábale la crueldad de la sen
á Montigny, permaneciendo separado tencia, y al considerar que hubiera
á alguna distancia el escribano Ga podido morir en un público cadalso
riel de San Estéban. Aquellas pala precedido de los pregones que le anun
bras que nadie oyó, que ni el preso ni ciasen al público como un infame y
el alcalde revelaron, debieron ser sin como un traidor, habia instantes en
duda la intimacion confidencial del que llegaba á mirar como un favor
acto terrible que iba á verificarse; distinguido, como un acto de clemen
debieron de ser el haberle manifestado cia y benignidad la disposicion del rey
que el rey, habida consideracion á la ue le ahorraba al menos la publicidad
calidad de su persona y usando con él ¿ la infamia.
de su real clemencia y , benignidad, Momentos hubo en que si bien se
habia moderado la severidad de la jus quejaba de la iniquidad de sus jueces
3.
242 CAUSAS CELEBRES.

que le condenaban hasta , sin oirle, aquello habia sido por traza y disposi
bendecia la mano generosa del rey que cion del rey, para preparar de aquel
mitigaba su rigor, y le evitaba la infa modo que pudiera hacerse la ejecucion
mia y la afrenta que con la publicidad de un modo secreto, evitándole la in
hubiera recaido en su noble linage. famia de un público suplicio, y hacer
Comparaba su suerte con la de su des aparecer á los ojos de su familia y del
raciado hermano el conde de Horn, mundo su muerte como un suceso na
públicamente decapitado en la plaza tural y efecto de la enfermedad.
de Bruselas, infamado ante todo el pue Toda la noche del sábado al domin
blo con humillantes pregones de alevo go se pasó en estas pláticas piadosas,
sía y traicion, y la memoria infamante en procurar amortiguar el odio que
que legaba á la historia, con su muer manifestaba contra sus enemigos y
te silenciosa, solitaria, cuya forma de prepararle á una santa confesion. Mos
bia ignorar para siempre el mundo, y tróse tan dócil, tan contrito y arre
hallaba en su afliccion motivos de tris pentido de sus pecados, tan firme en
te consuelo. los propósitos de la religion, que para
Vuelto en sí de su sorpresa y mas no dejar duda de sus sentimientos re
sereno, pidió Montigny se le , trajese ligiosos, quiso escribir un memorial en
un religioso para tratar con él y co que se consignasen estos principios.
municar sobre las cosas de su alma. Pensaba primero haberlo dictado á
Entonces don Alonso de Arellano le fray Hernando; pero éste le hizo ver
dijo que alli habia traido consigo al que aun cuando le costase algun tra
padre fray Hernando del Castillo que bajo por el estado de escitacion en que
que habia venido tambien de Vallado se hallaba, ya por la triste situacion
lid, á los ojos de las gentes del pueblo en que se veia, ya tambien por la en
como casualmente, pero enterado de fermedad que le aquejaba, convenia
todo con la mayor reserva, para pres que fuese todo escrito de su puño y le
tarle sus consuelos en aquel terrible tra para que no se pudiese decir en
lance. Aceptó con gusto los auxilios de ningun tiempo habia sido por las su
este religioso, cuya fama de predica gestiones de su confesor, y lo habia
dor era universalmente reconocida en firmado en aquellos momentos en que
España, y entrando éste en la estan— perturbada el alma y debilitados los
cia en que se hallaba el prisionero se sentidos, el hombre no sabe ni tiene
acercó á su cama acompañado de don conciencia completa de sus acciones.
Alonso, que se retiró en seguida. Accedió á ello Montigny con grande
Entonces el religioso le declaró co trabajo y teniendo que interrumpirse
mo iba á morir; le escitó á que se en varias veces, escribió la siguiente pro
comendase á Dios, llevase con pacien testa de su fé, como si se hallase en
cia el durísimo trance en que se halla los últimos momentos de una enfer
ba, procurando calmar la grande im medad natural, porque segun las ins
paciencia é irritacion que al , pronto trucciones del rey no le era permitido
causó al desgraciado Montigny la noti escribir cartas ni hacer alusion en do
cia, lamentándose de la iniquidad de cumento alguno á la ejecucion que se
la sentencia dictada sin oirle, sin de iba á verificar. -

fensa y sin otro testimonio que el de Este documento autógrafo se en


sus enemigos. cuentra en el archivo de Simancas en
Escitóle el padre Hernando á que tre los papeles de Estado, legajo 543.
la recibiese con resignacion, recordán
dole la injusticia é iniquidad con que (Autógrafo.)
habia sido tratado el Salvador de los
hombres para redimirle á él y á todo Yo Flores de Montmorency digo:
el género humano de sus pecados. Pro que á mi noticia ha venido que algu
curó tambien calmar la grande ene nas personas han ¿ mí que
mistad y enojo que tenia contra el al en las cosas de la religion no he teni
caide don Eugenio por la estrecha re do la fé de la Santa Iglesia Católica
clusion en que le habia tenido los últi Romana, y que he seguido y creido
mos dias, haciéndole presente que otras religiones nuevas, lo cual todo,
FLORES DE MONTMORENCY. 243
==

ha sido falsedad y gran mentira. Y por Meditaciones de fray Luis de Gra


que ninguna persona pueda pretender nada.
ignorancia de la fé en que he vivido, Iba aproximándose la noche, y con
y quiero morir y muero, estando ya ella la última hora de su vida, porque
en este artículo digo y protesto que la ejecucion, con arreglo á las órdenes
creo todos los artículos y cosas que la del rey, debia verificarse en la madru
Santa Iglesia de Roma tiene y cree con gada del lunes. Volvió á protestar de su
su cabeza el Papa Vicario ãe Cristo, inocencia en los cargos que contenia la
sucesor en el oficio y autoridad de San sentencia, manifestando que no queria
Pedro, con todos los siete sacramentos ser perdonado por Dios si tenia culpa
y la virtud de la pasion de Jesucristo contra su rey, á quien suponia enga
Nuestro Señor que en ellos está encer ñado por sus enemigos, mostrándosele
rado: y confieso la verdad del purgato agradecido porque le evitaba la publi
rio y el órden de los estados eclesiás— cidad de la sentencia y su ejecucion.
ticos, y todas los otras cosas en parti. Dejáronle todo el tiempo que quiso
cular segun que están determinadas para poder disponer su alma.
en el santo concilio Tridentino. Y por Eran ya cerca de las dos de la ma
que esto es verdad y no he tenido ni ñana del lunes 16 de octubre, cuando
tengo otra religion, ni quiero salvar— viendo fray Hernando que se hallaba
me en otra ninguna, firmé este con bien dispuesto para la muerte el señor
mi nombre á 14 de octubre de 1570 an de Montigny, salió á avisar á don Eu
nos en la fortaleza de Simancas.—F. DE genio de aquellas favorables disposi
MONTMORENCY. Cl.000.S.
Entró entonces el alcalde, que con
Ya asegurada su fama y reputacion el escribano y el verdugo, habia esta
de católico con este documento, toda do todo el dia oculto y encubierto, sin
vía quiso escribir una memoria de des que nadie los viese ni supiese de su
cargos para sus criados, no querien existencia en una de las habitaciones
do testar, decia, puesto que habiéndo del castillo. Volvieron entonces á leer
le secuestrado todos sus bienes no te le y notificarle la sentencia como se
nia de qué disponer. habia hecho al principio, porque el al
Las prendas y pagos de que dispuso calde era muy celoso de que se obser
eran de insignificantes cantidades. No vasen aun cuando fuesen en secreto,
se le permitió escribir á su muger, á todas las ceremonias y ritualidades del
no hacerlo como próximo á morir na derecho.
turalmente, á lo que se negó, no que Terminada la lectura, volvió Mon
iendo engañarla, y contribuir á una tigny á mostrar el agradecimiento que
mentira. El resto de la noche, en que tenia al rey por la forma en que man
no le fué dable descansar, la pasó en daba se ejecutase la sentencia, se en
conversaciones piadosas y preparán comendó á Dios, besó devotamente un
dose para la confesion, que hizo á las crucifijo que le presentaba el padre
siete de la mañana del domingo. Hernando y abrazándose con este pia
Mostróse en ella humillado, contri doso sacerdote, que derramaba amar—
to, si bien protestando la inocencia gas lágrimas persuadido de la inocen
de las culpas por las que se le con cia de aquel poderoso magnate flamen
denaba. -

co, se desprendió de sus brazos.


A las diez celebró misa en un altar Entonces el verdugo se acercó á la
portátil delante de su cama el padre cama, é hizo su oficio dándole garrote.
Hernando y le administró el Santísimo Retiró despues el verdugo los ins
Sacramento de la Eucaristía, que reci trumentos del suplicio, y una hora
bió con las mayores muestras de fervor despues salian juntos por la puerta se
y contricion. creta del castillo, envueltos en las
Lo demas del dia permaneció solo sombras de una noche oscura de octu
con el padre Hernando, tomando algun bre los tres hombres que habian en
ligero alimento para poder sostener trado el sábado á las diez de la noche,
sus desfallecidas fuerzas y emplean el alcalde, el escribano y el verdugo
do algunos ratos en la lectura de las de Valladolid.
v.
244 CAUSAS CELEBRES,
=e

Nadie supo que habian estado en nia y como él habia sentido tanto verse
tonces en Simancas; se habia impuesto estrechar y recoger que de ello habia
pena de muerte al escribano y al ver recrescido una calentura, con la dispo
dugo si lo descubrian, si pronuncia sicion que halló de la enfermedad pa
ban sobre ello la menor palabra. sada, que los médicos temian por peli
Aquella misma noche los criados grosa, y ansi lo ha parescido, porque
del alcaide vistieron al señor de Mon aunque le han hecho los remedios y
tigny el hábito de San Francisco con diligencias posibles por el licenciado
que le amortajaron para que, echada Viana que le habia curado en la enfer
la capucha sobre la cabeza se ocultase medad pasada, y de quien él tenia sa
que habia recibido garrote. A la ma tisfaccion y con comunicacion del li
ñana siguiente publicaron su muerte cenciado Luis Fernandez de Tordesi
como resultado de su enfermedad, á llas, médico que fué de la reina doña
la que se habia atribuido las medici Juana nuestra señora, que está en glo
nas que antes habian traido al castillo ria, no han bastado porque él se ayu
despachadas en la botica del pueblo daba mal sintiendo d¿d Verº CieS
y que las arrojaban á un lugar in cubierto este trato, ó como él afirmaba
mundo. con grandes juramentos, ver que pa
Publicada su muerte, se verificó el descia sin culpa y en tiempo que tenia
entierro de una manera modesta, co grande esperanza de que V. M. le haria
mo podia permitirlo los recursos de una toda merced; y ansi fué Dios servido
corta poblacion como Simancas. de llevarle para sí ayer lunes entre las
Faltaba sin embargo dar un docu tres y las cuatro de la mañana. Hallóse
mento auténtico que pudiese en todo aqui en esta coyuntura el Padre Fray
tiempo comprobar que la muerte del Hernando del Castillo y desde que pa
señor de Montigny habia sido natural, resció que estaba en necesidad y ¿
documento para engañar al mundo y pidió le asistió y confesó y dió el San
hacer ver á todos que aquella muerte tísimo Sacramento, y él hizo todo lo
no habia sido efecto de una ejecucion que como cristiano debia, y murió
judicial. En el archivo de Simancas, (cuanto se pudiera juzgar en lo exte
existe todavia entre los papeles de Es rior) tan católico que se puede tener
tado, legajo núm. 544, la carta en que mucha esperanza de su salvacion. Dejó
don Eugenio de Peralta, el dia 16 de cierta memoria de descargo para sus
octubre, es decir, al siguiente de la criados: no quiso testar ante escribano,
ejecucion, da parte al rey, como de un porque dijo que estando secuestrados
suceso ordinario, de la muerte de Mon sus bienes él no tenia de que poder man
tigny de resultas de una enfermedad dar. Va con esta y todos los demas pa
que le sobrevino en su encierro; docu peles que yo hallé en su poder... He he
mento que habia de servir, como vere— cho inventario de sus bienes, y aunque
mos, á Felipe II para remitirlo al duque ha habido poco de que, se ha hecho su
de Alba y hacer que circulase en los enterramiento lo mejor que acá se ha
Paises Bajos, donde su muerte hubiera podido segun el lugar donde se halló.
podido añadir nuevo fuego á los tras De lo cual enviaré á V. M. mas particu
tornos que ya habia. Este notable do lar relacion. Nuestro Señor, guarde á
cumento, copiado del original, es el si V. M. etc., de Simancas á 17 de octu
guiente. (1) bre de 1570.

Por otra de diez de este dí cuenta á El padre fray Hernando del Casti
V. M. de la huida que el señor Montig llo, que no tenia , necesidad de salir
ny habia intentado de esta fortaleza y ocultamente cual fugitivo asesino, co
envié la informacion de los indicios que mo lo habian hecho ios empleados de
desto hallé como V. M. habrá mandado la justicia del rey, en aquella misma
ver, y referí lo que yo habia hecho pa mañana del 16 de octubre, pocos mo
ra tenerle con la seguridad que conve mentos despues de haberse verificado
la ejecucion de Montigny, escribió al
(1) (Archivo de Simancas.—Estado, nú doctor Velasco, secretario del rey, va
mero 544). rias particularidades de los últimos
FLORES DE MONTMORENCY. 245
-e
$e

momentos de aquel á quien habia sido de otro superior dispuesta y ordenada.


llamado á asistir en el último trance. Procuróse de darle en su trabajo el
Creemos que verán con gusto nuestros gusto que se sufriese y acabó de per
lectores esta relacion escrita por un suadirse que era merced la que S. M.
hombre tan piadoso, por un hombre le hacia en guiar su negocio por estos
que años mas tarde debia tambien de términos. Desde la hora que digo has
hallarse á la cabecera del monarca Fe ta las dos del domingo de mañaña gas
lipe II moribundo, que debia espiar té en satisfacerme, asi de la fé que te
sus culpas, si no por la mano violenta nia como de las otras cosas necesa
de la justicia humana, por la de Dios rias para tan larga jornada, y quedé
que le mandó una enfermedad de las satisfecho y mucho por entonces: y él
mas terribles, haciendo que su cuerpo ordenó un memorial escrito de su mano
fuese todo una pura llaga desde la ca que va con ésta por donde yo me guia
beza á los pies, que de sus llagas bro se en sus descargos, siendo S. M. ser
tasen gusanos que ni la ciencia de los vido de acomodarle para ellos. Y por
médicos y los mas esquisitos cuidados estar como estaba obligado en concien
lograban estinguir, manteniéndose en cia á satisfacer en público á la ruin
el estado de una penosa agonía duran sospecha que dél se tenia en las cosas
te mas de treinta dias; enfermedad de religion me dió ese testimonio y
terrible que pocas veces se presenta confesion que V. verá y no la recibí
en la medicina, y que hizo recordar escrita de mi mano porque si acaso pa
la terrible dolencia con que la justicia reciese á S. M. mandarla salir á plaza
divina afligió en Sardica á otro empera algun dia, no se pudiese decir que la
dor, al perseguidor terrible de la Igle habia firmado enfermo sin ver ni leer
sia, al cruel Galerio!! lo que contenia. El memorial va en es
Esta carta, que autógrafa tambien tilo de quien pide limosna, y de suyo
existe en el archivo de Simancas, Es advirtió el que debajo de aquella sen
tado, legajo 543, está concebida en es tencia no era señor de un real para dis
tes términos. poner dél de otra suerte: diósele lugar
á henchirle de la suerte que en él se
(Autógrafo.) verá, porque no pareció que las cosas
que contenia eran fuera de camino pa
ILUSTRE SEÑOR. ra suplicarlas á su Rey Católico un
hombre tan desdichado y puesto en la
El negocio que S. M. cometió al se última pobreza. Los vestidos y ropa
ñor don Alonso de Arellano se acabó blanca, cama y otras cosillas que deseó
de concluir hov lunes á las dos horas se diesen á sus criados como van se
de la mañana de los 16 deste, y en él ñalados, y la plata que diese, es de tan
se procedió por el órden é instruccion ta pobreza que es y lo fuera grande
que de V. traia. El sábado pasado cer para el escudero de la mas triste aldea
ca de las diez de la noche se notifi
• - -
de Campos. Los otros descargos, que
có la sentencia al reo, que vivia de son obligaciones y deudas conocidas,
lla tan descuidado como cierto de la son tambien pocas, lo que parece gra
venida de la Reina nuestra Señora y tificacion de servicios en las personas
confiado de su inocencia; y asi mos de Juan de Horni y Antonio de Segovia
tró alguna alteracion á los principios, su page, y Alonso de Herrera page, y
que fué por horas creciendo. Don Alon Lope de Palacios que servia de mayor
so acabó de leer papeles y yo co domo y los demas: tiene largos des
mencé á hacer mi oficio y aquella per cuentos y justificados, y al cabo
soua á oirle con sosiego y mucha mo se rematan en haber mostrado su deseo
deracion en las palabras y gran pacien y la esperanza que le daba pedir li
cia en el semblante esterior; y con la mosna á quien y para quien la pedia,
misma procedió en todo hasta el pos y que cuando fuese todo mucho (que
trer punto. Estaba lastimado de don no le parece ni lo es) importaba para
Eugenio por la novedad que en su re la pretension que S. M. tiene en el mo
elusion habia usado estos dias, y que do de proceder, aventurar eso y mas
dó satisfecho de entender que venia por donde se entendiese quc pues para
246 CAUSAS CELEBRES.

sus descargos no se pedia como para el la conformidad con la voluntad de Dios


condestable don Alvaro de Luna, no y de su Rey, cuya sentencia siempre
era este eclipse como el otro. V. me alabó por justa, mas siempre protes
halló bueno para padrino de desdicha tando de su inocencia en los artículos
dos, y así es justo seamos todos favore del príncipe de Oranges y rebelion,
cidos de quien tambien representará á en los cuales no queria ser de Dios
S. M. la razon que hay para ello, y la perdonado, si tenia culpa á su Rey
¿? que maturaleza enseña con los mas confesaba le hacian la guerra sus
efuntos mientras no se publican mas enemigos que en su ausencia habian te
causas para otros rigores ejemplares, nido lugar de vengarse del á su salvo,
que en este particular cesan durante y esto dijo sin cólera ni impaciencia ex
el silencio que hay, que hasta agora es terior mas que si hablara en las cosas
grande y solo se suelta para condenar pertinentes de un estraño, perdonán
á don Eugenio que de mal acondiciona dolos á todos con mucho ánimo y de
do apretó tanto que quebró la vida que mostraciones de cristiano predestina
de tan flaco hilo colgaba. Si S. M. fue— do por este camino.
se servido de saber las particulares Deia en mi confianza una cadenilla
obligaciones que esta persona tiene, á delgada de oro de poca sustancia, colga
las que desea se den esas recompensas da de ella una sortija de oro, sello de
embiarlas hé á V. mandándome re sus armas, y otra sortija con una tur
mitir un traslado del memorial porque quesa; el sello y cadenilla para que lo
no queda consigo, ni le ha leido nadie, envie á su muger, y la otra sortija á su
mas de lo que en general pudieron en suegra, por ser prendas que dice que
tender los testigos de lo principal y ellas le dieron de recien casado; y que
haberse publicado que hizo memoria de la escriba como Dios le ha llevado de
algunos descargos sin descender á lo esta vida en tiempo que no pudo tener
que son, sino es algunos que eran bue libertad de servilla y honralla, y que la
nos de entender, y haberse echado fa envia aquel juguete por ser el que
ma que sin dar á S. M. cuenta primero traia consigo y para su memoria; que la
no se cumplirá escepto lo de su enter suplica se acuerde de la sangre de que
ramiento, del cual y del aparato que viene, y sea tan católica como sus pasa
tuvo y de las otras cosas dará razon el dos, y no deje llevarse de opiniones ni
señor don Alonso mas larga. Yo haria setas nuevas, sino permanezca en la
mal oficio si no suplicase á V. con la feé y religion que la iglesia católica ro
instancia que puedo por el buen des mana enseña, y el Emperador Cárlos V.
pacho de lo que aqui va, y por la bre nuestro Señor, defendió por sus leyes,
vedad (que es lo mas importante) para siempre en devocion y servicio del
cerrar las puertas á discursos de es— Rey nuestro Señor como della lo confia,
trangeros y naturales, y para acertar y otro tanto á su madre. Está esto en
¿izoá responder á quien me pregunte si mi poder para darlo por órden de S. M.
este hombre memoria de su alma como V. me lo mandare avisar, y en
y quien y como la cumple. En lo mas caso que se dé licencia para escribir,
principal ha estado tan bueno que pue venga la carta ordenada conforme á es
de dejar envidia á los que quedaron. to, en efecto para que S. M. sea servi
Comenzóse á confesar ayer á las siete do y yo cumpla con mi obligacion, la
horas, y á las diez le dije la misa y le cual me dejó esta persona subjeta á la
administré el Santísimo Sacramento. voluntad Real: en lo mas y por las pren
En lo uno y en lo otro tuvo las demos— das será mi carta recibida. Esta es , ya
traciones de católico y buen cristiano mas larga de lo que querria quien de
que yo deseo para mí: gastó todo el sea tampoco como yo ser pesado, mas
resto del dia y parte de la noche si— lleve V. la pena de la culpa que no hi
guiente en oracion y en actos de peni ce para que V. me quisiese por testigo
tencia y leccion de algunas cosas de de trabajos. Nuestro Señor la ilustre
Fray Luis de Granada, á quien en esta persona de V. guarde con el acre enta
prision se habia mucho aficionado. Fué miento que desea en Simancas diez y
ie creciendo por horas el desengaño de seis Octubre B. L. M. á V. su Servidor
la vida, la paciencia, el sufrimiento y —Fr. Hernando del Castillo-Al Ilus
*
FLORES DE MONTMORENCY. 247

tre Sr. mi Señor el Dr. Velasco del vereis por una relacion que irá con es
Consejo de S. M. ta en cifra y sucedió tan bien que has
ta agora todos tienen creido que murió
El rey Felipe II. recibió con la im de enfermedad, y asi tambien se ha de
pasible frialdad que recibia todas las dar á entender allá, mostrando descui
cosas, la noticia de haberse cumplido dada y disimuladamente dos cartas que
su voluntad en la persona del señor de irán aqui de don Eugenio de Peralta
Montigny. Redactó en cifra una rela de quien se fió el secreto como mi
cion de los sucesos, y escribió al du alcaide de la fortaleza de Simancas
que de Alba desde el Escorial con fe donde se habia llevado y estaba preso
cha 3 de noviembre una carta toda de el dicho Montigny, el cual si en lo in
su puño y letra y en cifra, dándole no terior acabó tan cristianamente como
ticia de lo acaecido y encargándole que lo mostró en lo esterior y lo ha referi
la carta que le habia dirigido ya, y que do el fraile que le confesó, es de creer
conocen nuestros lectores de don Eu— que se habrá apiadado Dios de su áni
genio de Peralta el alcaide de Simancas ma. Mas por otra parte vemos que el
en la que se noticiaba la enfermedad y demonio en tales tiempos suele dar tan—
muerte natural de Montigny, la mos to esfuerzo á los hereges, que si este lo
trase á todos sin pretension, descuida era no le habrá faltado. Resta agora
da y disimuladamente, ara que de que vos hagais luego sentenciar su cau
esta manera se estendiese la voz de que sa como si hubiera muerto de su muer
habia sido víctima de una enfermedad te natural, de la manera que se sen
y no del rigor de la justicia. Para llevar tenció la del marqués de Verges, que
mas adelante este disimulo, mandó que con , esto me paresce que se ha conse
no se hiciese mencion de la sentencia guido lo que se pretendia, pues se ha
que ya habia sido ejecutada, sino que hecho justicia y evitado el juicio y ru
volviese á fallarse la causa como si hu mor qne causara si se ejecutara en pú
biese muerto durante la formacion del blico y enviaréisme copia de lo que allá
proceso. La carta de que vamos hablan se hiciere; que en lo que toca á la pro
do es la siguiente: vision de los oficios y banda que vacan
por el dicho Montigny, visto lo que me
Minuta de carta de S. M. al duque de escribís en la de diez de octubre os
Alba. Del Escorial á 3 de noviem avisaré con otro de mi voluntad.
bre de 1570. En lo que toca al particular de Van
denesse se ha hecho la diligencia, por
Al márgen dice: Al duque de Alba que el alcalde Salazar (por cuyo medio
en su mano. Cifra todo de la mia (1).se habia comenzado su causa) estuvo
ausente muchos dias en lo de Granada,
Habiendo llegado la carta que me mas agora es ido á Segovia sirviendo á
escribistes á diez y ocho de marzo con la princesa mi hermana y llevó vuestra
la sentencia que por vos se pronunció requisitoria para usar de de la ma
contra Montigny estando yo en el An nera que lo habeis advertido, y con el
dalucía, me paresció suspender la eje primero se os enviará la escriptura y
cucion della hasta volver aqui, y aun acto que de aquello se formare. Y por
que siempre fué tenida por muy justi que no me acuerdo bien de lo que de
ficada, reparé algunos dias en mandar cís que me habiades escripto que os
que se ejecutase en la forma que venia parescia se debia hacer del dicho Van
porque se me representó que causaria denesse, será bien que me lo torneis á
gran rumor y nuevo sentimiento en escribir para que yo mire en ello.
sus Estados y aun en los vecinos. Y En lo de Simon Renard se hicieron
asi se anduvo mirando de la manera las diligencias necesarias y con esta
que se podria hacer con menos es— irán las escripturas que vereis para
truendo, y al fin me resolví en lo que que se pueda proceder en su causa con
forme á justicia, que cuanto mas pres
(1) Sacada de la minuta original que se ha to se echare á una parte será
lo mejor
lla en el Archivo de Simancas entre los pape para acabar con estas cosas.
les de Estado, número 544. -
248 CAUSAS CELEBRES.
-=3

Asi pereció por mano del verdugo la matanza que de ellos se ha hecho en
en el silencio de la noche en su propia París el dia de San Bartolomé, y su es
cama uno de los mas nobles prínci— peranza se desvanece. Tiene que aban
pes de Flandes, Flores de Montmoren donar las plazas conquistadas, que su
cy, señor de Montigny y de Lenzas, ca fren todos los horrores de la guerra al
ballero del Toison de oro, gobernador ser ocupadas por las tropas españolas,
y gran bailío de la villa de Tournay dirigidas por el inflexible duque de Al
y Saint-Aman y Tournesis, juzgado ba. Sus mismos soldados quieren en
por un tribunal incompetente, sin oír tregar al príncipe de Orange en ma
sele sus descargos y defensas, y sin ha nos del duque de Alba, y aquel, salva
berse pronunciado sentencia por los do milagrosamente por sus oficiales
jueces á los que solo se pidió un pare que se oponen á semejante infamia,
cer, y con ellos formóle la sentencia el disuelve en tan crítica ocasion un ejér
duque de Alba, siendo tan irregular el cito tan terrible y peligroso para él co
juicio como la ejecucion, cuyos terri mo sus enemigos. La ciudad de Harlen,
bles pormenores mas de una vez habrán cercada por el ejército español al man
hecho estremecer á nuestros lectores. do del hijo del duque de Alba, don Fa
El duque de Alba en cumplimiento de drique de Toledo, capitula con la cláu
la órden del rey hizo pronunciar dos sula de salvar sus vidas sus habitan
meses despues la sentencia al tribu tes, escepto cincuenta tres, y no ser
nal, que declaró la confiscacion de to saqueada. Cumple don Fadrique la ca
dos sus bienes que ascendian á la suma pitulacion; pero al tercer dia llega su
de once mil doscientos cincuenta flori padre y hacer perecer mas de nueve
nes que fueron aplicados al rey dejan cientas personas. Al mismo tiempo la
do en la mayor miseria á su noble es escuadra holandesa destrozaba la espa
posa. No era tanto el deseo de estinguir ñola y compensa los desastres sufri
los principales miembros de la noble dos en tierra.
za, como el de apoderarse de sus cuan El duque de Alba quebrantado en
tiosos bienes lo que guiaba á Felipe II. su salud, reitera la dimision de su go
y al implacable gobernador de los Pai bierno, en el que él mismo se jactaba
ses Bajos el duque de Alba. Este que de haber hecho perecer durante los
creia haber pacificado con torrentes de seis años de su duracion, diez y ocho
sangre la rebelion, con las nuevas y mil personas por mano del verdugo, á
fuertes contribuciones que impuso dió cuya cifra hay que añadir el inmenso
lugar á nuevas agitaciones. Entonces número que habia muerto en los cam
aunque habia llegado ya su sucesor el pos de batalla, y en las ciudades toma
duque de Medinaceli, creia de su ho das por la fuerza.
nor y gloria no dejar el mando ínterin El gobierno del duque de Alba fué
no dejase en paz aquellas provincias. una gran calamidad para los Paises Ba
Los flamencos se apoderaron de algu jos, fué un borron para el crédito de
nas plazas; la escuadra de los ingleses, España y una de las principales causas
batió en el canal de Holanda á la flota que ocasionaron la separacion de aque
española mandada por el duque de Me llos estados de la corona de Castilla, y
dinaceli en 1571 aprisionando veinte el nombre de este general, aun des
buques de los mejores y acometiendo pues de dos siglos y medio, se pronun
de retirada al puerto de la Esclusa. cia hoy con horror en aquellos paises.
El príncipe de Orange desde el fon Le reemplazó en el mando un hombre
do del retiro que habia escogido en de distinto temple, don Luis de Reque
Alemania, fomenta el espíritu de dis— sens, cuyo primer acto fué el de man
cordia en los Paises Bajos. Su hermano dar destruir la estatua que, en su in
Luis de Nassau sorprende la plaza Mons: solente orgulloso ó engreimiento, habia
el príncipe de Orange sale de su retiro, hecho erigir el duque de Alba sobre la
se apodera de Ruremonde, Mechalin fortaleza de Amberes, borrando las
y otras fortalezas; empero cuando con inscripciones, que insultaban á una
taba con el poderoso auxilio de los pro nacion amante de su independencia y
testantes de Francia, recibe la noticia de de su libertad.
-eccCCCCrºcke
EL FINGID0 REY DE PORTUGAL

GABRIEL DE ESPINOSA,
PASTELERO DE MADRIGAL.

(asoa)

A la muérte de Juan III de Portu quiere hacer entrar en él al rey Felipe II


gal ciñe la corona de este reino su nieto su tio. Ni la oposicion de la reina do
don Sebastian cuando todavía se halla ña Catalina, ni la de su tio el cardenal
ba en la cuna. Enrique, ni la de los primeros señores
Fueron regentes durante su infan de Portugal, basta para apartar al fo
cia su abuela doña Catalina, y el car— goso rey de su proyecto.
denal don Enrique su tio. Desea concertar con Felipe II los
Desde niño revela don Sebastian medios de llevará cabo su empresa, y
una imaginacion fogosa; y exaltada en aun se lisonjea de decidirle á tomar
la juventud su alma con as exhortacio parte en ella.
nes de su confesor, el padre Luis de la Don Sebastian y Felipe II se avis
Cámara, siente en su alma las inspira tan en el mes de diciembre de 1576 en
ciones de ser mas que un rey, el capi el monasterio de Guadalupe en Estre
tan de Cristo. ¿ en su mente el madura. Felipe II era demasiado pru
proyecto de marchar á las Indias á dente para aventurarse en una espedi
descubrir nuevos reinos que agregar á cion arriesgada de éxito dudoso, y que
la fé de Jesucristo. podia comprometer la seguridad de sus
Para apartarle de esta idea tan pe reinos por hallarse en aquellos mo
ligrosa dirigen sus miras á que emplee mentos tratando con el gran Turco de
su valor y sus armas en el Africa com una tregua de tres años.
batiendo el islamismo. Predijo Felipe II á su desgraciado
Una circunstancia vino á fijar de sobrino el resultado de la empresa, em
un modo perenne su designio. Habia pero éste resuelto á llevarla á cabo vol
sido Muley Mahomet, rey de Fez y de vió á Lisboa, reunió á los nobles de su
Marruecos, despojado de su trono por reino, y á los consejos que estos le da
su tio Abd-el-Molik, conocido por Mu— ban para que desistiese de ella les con
ley-Moluc, y á quien la historia ha con testaba únicamente que no les habia
servado el nombre de Maluko. llamado para oir su parecer, sino para
El destronado rey implora el auxilio que le diesen gente y recursos para
de don Sebastian, prometiéndole dar aquella jornada.
grandes posesiones en el Africa. Reune diez y siete mil hombres, y
Don Sebastian acoge su proyecto, y poniéndose á la perºde ellos acom
2b 0 CAUSAS CELEBRES.
- -
-

pañado de algunos aventureros, de al La noticia de esta derrota conster


gunos títulos de su reino, entre los que nó á Portugal, un luto inmenso cubrió
estaba el prior de Crato, don Antonio, aquel reino, ¿ era rara la familia
hijo del infante don Luis, se embarca que no contaba en el gran desastre una
en Lisboa el mes de junio de 1578. víctima.
Detiénese un momento en Cádiz, Para reemplazará este rey, que
atraviesa el estrecho, y desembarca en tantos dias de ventura prometia mejor
Arcila con intento de sitiar á Larache. dirigido á su pais, entra á sucederle en
Al quinto dia de haber desembar el trono el cardenal don Enrique, an
cado en Africa, acampa en los llanos de ciano enfermizo que no podia dejar su
Alcazarquivir, donde le aguardaba el cesores por su estado eclesiástico, por
ejército del Maluko, compuesto de cua su edad, y por sus males.
renta mil caballos y treinta mil in Fué proclamado el 28 de agosto
fantes. de 1578.
Muley Mahomet, á quien iba á res El cadáver de don Sebastian fué
tablecer en el trono don Sebastian, le buscado cuidadosamente en el campo
habia hecho creer que numerosos par de batalla. Tardó largo tiempo en en
tidarios suyos abandonarian las bande contrársele, pero al fin fué hallado
ras del Maluko y se pasarian á él. El desnudo, lleno de heridas en la cabeza
Maluko marchaba en una litera próxi y en el cuello, y presentado á Muley
mo á fallecer de un momento á otro: Hamet, hermano y heredero del Malu
era toda la esperanza que tenia el ejér ko, hizo éste enterrar el cuerpo en el
cito de don Sebastian. alcázar, siendo despues rescatado por
Cual si Dios hubiese querido cegar— el gobernador portugués de Ceuta en 10
le para perderle, resiste el consejo que de diciembre del mismo año.
le dan los hombres conocedores del Un suceso, sin embargo, acaecido
modo de guerrear de los moros, de que en la noche del dia de la fatal batalla
los aguardase atrincherado, y los aco de Alcazarquivir debia tener grandes
metiese de noche. Su temeridad le ha consecuencias para el reino de Portu
ce lanzarse al encuentro del enemigo, gal y para el de España. Entre los fu
en la mitad del dia 4 de agosto se tra gitivos que se habian salvado de la
ó la batalla en posicion desventajosa gran matanza llegó un grupo de ellos á
para los cristianos. Wióse cercado el Arcila cuando ya se hallaban cerradas
ejército de una inmensa morisma. En sus puertas. Llamaron á ellas y no qui
vano don Sebastian demuestra un ma sieron abrirles. Al ver entonces el pe
ravilloso arrojo; en vano busca la ligro en que se hallaban, uno de ellos
muerte; en vano en el momento mismo dijo que alli venia el rey don Sebas
de la batalla muere el Maluko: sus te tian. Entonces los de la villa abrieron
nientes ocultan su muerte, y abriendo las puertas, y uno de ellos embozado
las cortinas de la litera en que iba, cuidadosamente y rodeado del respeto
aparentan que daba las órdenes que y de la reverencia de los que le acom
trasmiten y continúa la batalla. pañaban, entró inmediatamente en la
Inútiles fueron los prodigios de va ¿ de aquila noticia, rápidamente
lor personal que hizo el ejército cris estendida, de que don Sebastian no ha
tiano; el campo quedó sembrado de ca bia muerto. Esto escitó al corregidor
dáveres, y el denodado don Sebastian de Lisboa don Diego de Fonseca, que
herido, derribado del caballo, es atra se hallaba en el ejército, á que proce
vesado por las lanzas de los moros en diese á hacer averiguaciones sobre la
la cabeza y en la garganta, que es lo verdad. Descubrióse la ficcion; discul
que dejaba descubierta su armadura. páronse los que la habian hecho con lo
Asi pereció martir de su fé religio inminente del peligro, y la necesidad
sa y de su exaltado eutusiasmo el rey que tenian de salvarse; empero bastó
de Portugal don Sebastian á la edad esto para que se divulgase la voz en
de 25 años. Once mil soldados habian Portugal de que el rey don Sebastian
¿ tendidos en el campo de bata no habia muerto, y esta creencia, que
lla; la flor de la nobleza de Portugal se halagaba los espíritus de los portugue
perdió alli. ses, se perpetuó de tal manera que ve
EL fINGIDo REY DE PóRTUGAL. 25
=== ==,

remos, dió por mucho tiempo causa á gueses, y acallar las antipatías del pue
ue se presentasen varios falsos reyes lo. Empleó enormes sumas en resca
e Portugal. tar los portugueses cautivos en la ba
Ocupado el trono de Portugal por talla de Alcazarquivir, redimiendo en
un anciano cardenal, era fácil de pre tre ellos al prior de Crato, don Anto
veer que en breve iba á suscitarse la nio, uno de los que se presentaban
cuestion de la sucesion al trono lusita pretendientes á la corona y que habia
no. Habia diversos pretendientes con de ser su mas terrible enemigo á la
derecho á aquel trono. Eran los princi muerte del cardenal-rey.
pales Felipe II, la duquesa de Bragan Al mismo tiempo Felipe II hacia que
za, el duque de Saboya y don Antonio, se consultase sobre su mejor derecho
prior de Crato, nietos todos de Manuel á la corona de Portugal, á la facultad
el Grande, padre de Enrique. de teología de la universidad de Alcalá
Se encontraba ya en la edad de se y á los mas entendidos jurisconsultos
senta y cuatro años, el cardenal, en españoles, haciendo al mismo tiempo
fermo, y sin esperanzas de tener hijos, ¿ don Cristóbal de Mora recogiese los
no obstante que acudió á la Santa Se ictámenes del jurisconsulto portugués
de con grande instancia y solicitud pa Barbosa, una de las lumbreras de la ju
ra que le autorizase á casarse, siendo risprudencia de aquel pais, y de , los
su objeto hacerlo con la hija del duque letrados de mas crédito de aquel reino,
de Braganza, jóven de catorce años. los que en un principio escribieron su
Felipe II intervino con la córte de dictámen clandestinamente, pero del
Roma para que no accediese á los de— que debia hacerse un gran uso en lo
seos del cardenal, y al mismo tiempo SU1CeSIVO.
mandó á Lisboa á don Cristóbal de Mo Cada dia la enfermedad minaba la
ra, hábil diplomático, para que disua existencia del rey don Enrique Dilató
diese al rey de su empeño de casarse, la reunion de las córtes, á las que iba
al mismo tiempo fuese preparando á reservar la decision de su sucesion,
s cosas para cuando sonase la hora esperando de un momento á otro obte
de su muerte. Esta era la hora en que ner la dispensa matrimonial. Convocó
Portugal debia volver á la corona de á cuantos se creyesen con derecho á
España, separado de ella por haber sucederle en el trono en 14 de febrero
don Alfonso VI dado este reino en dote de 1579, para que en el término de dos
á su hija bastarda doña Teresa. meses espusieran su derecho, ofrecien-.
Grandes fueron los obstáculos que do fallar en justicia. Juez incompeten
tuvo que vencer Felipe II, porque el te era el monarca para elegir su suce
pueblo portugués no queria verse so sor; empero los pretendientes se some
metido á los monarcas de Castilla. tieron á su fallo. Felipe II, sin embar
Ademas de don Cristóbal de Mora go, quiso apoyar su derecho haciendo
mandó Felipe II al cardenal-rey una una intimacion á la ciudad de Lisboa,
embajada , con el dominico fray Her en la que, al fundar un derecho, ma
nando del Castillo, para que le di nifestaba que no era un monarca es
suadiese del proyecto de matrimonio. trangero al Portugal, sino hijo de sus
Nuestros lectores han visto ya que fray príncipes naturales y de su misma san
Hernando del Castillo era uno de los gre. El rey don Enrique se inclinaba
nombres de confianza de Felipe II, pues á la duquesa de Braganza.
fué el que asistió en los últimos mo Los representantes de los diversos
mentos al señor de Montigny. pretendientes se reunieron en Lisboa;
Mal éxito tuvo la embajada de fray entre ellos fué á hacer valer tambien
Hernando del Castillo, porque el de sus derechos el prior de Crato, hijo
crépito rey-cardenal, no conociendo su bastardo del infante don Luis, herma
situacion, se hallaba mas empeñado no del actual rey don Enrique. To
que nunca en obtener la dispensa de maba su defensa queriendo probar su
su matrimonio y verificarlo. Felipe II, legitimidad, manifestando que su pa
con aquella gran precaucion que marca dre habia estado casado con su madre,
ba todos sus actos, comenzó por ganar— muger de raza hebrea, célebre por su
se las voluntades de los nobles portu hermosura y conocida por la Pelicana,
º
252 CAUSAS CELEBRES.

¿ como tal era hijo legítimo y de que arrojado del reino, favorecido por
ia precederá todos los pretendientes. la Francia, la Inglaterra y el pontífice,
Oido por el rey Enrique y vistas las agitaba los ánimos. El rey-cardenal,
probanzas que presentaba acompaña viéndose ya cercano al sepulcro, de
do de varios jueces eclesiásticos, dió claró á las cortes de Almeirin que al
su sentencia declarándole no legítimo. rey Felipe II de Castilla correspondia
Procedió ademas á prender á varios la sucesion en la corona despues de su
testigos como falsos, condenándole á muerte. De los tres brazos del reino,
ser desnaturalizado del reino, dester el eclesiástico se conformó con esta de
rado, prohibiéndole la entrada en él y cision, tuvo tambien en su favor la ma
confiscándole sus bienes. Era hombre yoría del estado noble; pero el bra
ue se hacia temible aun en vida de su zo popular se declaró en abierta oposi
tio el rey-cardenal; por eso le arrojó cion pidiendo un rey portugués y no
del reino, y no viéndose con apoyo en estrangero. Querian otros que se pro
él, salió don Antonio, si bien dipuesto á clamase que era electiva la corona de
renovar sus pretensiones contando con Portugal.
sus numerosos parciales y con el afec— En este tiempo y tal vez por las os
to del pueblo, que veia en él un portu cilaciones que producia la cuestion de
gués. La Inglaterra y la Francia, en sucesion, cundia en el pueblo la noti
odio á Felipe II, le prestaban su apoyo. cia alarmante, y se creia como una ver
Llegaba tal vez el momento en que dad inconcusa, que el rey don Sebas—
el cardenal-rey iba á decidir la cuestion tian no habia muerto en la batalla, y
de la sucesion en la corona. Conocia Feque disfrazado y escondido, se hallaba
lipe II las simpatías que tenia por la errante en Portugal. Un suceso envuel
duquesa de Braganza, y por medio del to en un misterio que la historia no ha
duque de Osuna y su agente don Cristó podido aclarar, vino á dar consistencia
bal de Mora, protestó que no reconocia á estos rumores que acogia ávida la an
en él derecho de decidir tan grande y tipatia que los portugueses tenian á los
delicado negocio. Le mandó tambien castellanos. -

los dictámenes de los jurisconsultos y Paseándose un dia un médico lla


teólogos de las universidades de Espa mado Mendez Pacheco en las márgenes
fía y los que los mas célebres de Lisboa del Tajo, al otro lado de Lisboa cerca
le habian enviado. de Torrevieja, donde habitaba la mu
Congregáronse las córtes portugue ger de Cristóbal de Tavora, favorito
sas, al fin en Almeirin y pidieron se que habia sido del rey don Sebastian
declarase el punto de la sucesion. In y acompañádole en su espedicion al
sistia don Enrique en hacer él el nom Africa fué mandado á llamar por esta
bramiento, empero las córtes acorda señora para que fuese á su casa. Alli
ron que el rey nombrase cinco gober encontró á la muger de Tabora, llama
nadores entre quince caballeros que le da doña Francisca Calva, que le espe
designaron ellas, y que de veinte y cua raba con el mayor cuidado y ansiedad.
tro jueces escogieran once que fallaran Rogóle que para un asunto urgente de
despues de su muerte la causa de la SUl ¿, marchase inmediatamente
sucesion, si á su fallecimiento quedaba á Guimaranes en la sierra del Carnero,
indecisa, debiendo todos conformarse donde encontraria en una alquería á un
en reconocer al que designasen los jue hombre herido que necesitaba de sus
ces. Quiso tal vez renovarse en Portucuidados. En vano la preguntó el sor
gal el famoso compromiso de Caspe prendido médico quien era el enfermo
e habia dado á Aragon un rey cuan para cuya asistencia le llamaba; solo
o á la muerte de Martin IV varios pudo sacar de ella que era una persona
¿ solicitaban la corona. noble, de alta ¿ ría y que en todo
elipe II protestó enérgicamente contra tiempo podria sacarle de cualquier ries
esta declaracion, y ante su actitud fir go y compromiso.
me y decidida empezó á titubear el rey El tono con que le hizo esta semi
cardenal, que comenzó á inclinarse al eonfianza aquella señora, el interés que
el rey de España. mostraba, los recursos que le facilitó
º ¿ prior de Crato, aun para hacer el ¿, espléndida
EL FINGlDO REY DE PORTUGAL. 253
3=

recompensa de cincuenta escudos que cion. Con el mismo silencio y con el


colocó en el acto en su mano al montar mismo misterio, terminada esta sacá
á caballo, traian ya inquieto y medita ronle de la habitacion y le llevaron á
bundo al médico. Llegó al anochecer á otra, donde permaneció unos seis
un pueblo llamado Villanueva donde dias. En ellos los cuatro que habian
pasó la noche, y á la mañana siguiente acompañado al enfermo durante su
al ir á continuar su viage, se le pre curacion, le hicieron algunas pregun
sentó un hombre preguntándole á don tas, muchas de ellas relativas al estado
de iba. Contestó el médico que á Gui político del reino.
maranes, y entonces, el que le habia Se informaron sobre la cuestion de
hecho la pregunta ledijo que él era el sucesion que se agitaba y sobre la opi
encargado de venir á buscarle y acom nion de los pueblos; y el médico, lleno
pañarle hasta el sitio donde se hallaba de embarazo y de cuidado por no co
el enfermo, cuyo auxilio reclamaba de nocerá ninguno de ellos, por la cautela
él. Pusiéronse en camino en el mas con que le hacian las preguntas y el aire
profundo silencio, observado por el de misterio que rodeaba las operacio
que le acompañaba, sobre el estado, la n es en aquellos sugetos, vacilaba en
condicion y la clase de enfermedad contestar, temiendo incurrir en algun
del paciente, lo que acabó de escitar desliz ó pronunciar alguna frase que
mas y mas la natural curiosidad del pudiera comprometerle. -

médico. No veia al enfermo mas que en el


Llegaron á Guimaranes y entraron momento de curarle y siempre con
en una modesta alquería, miserable en el rostro cubierto por el antifaz, sin
- -

su esterior, empero ricamente alhaja que hubiese podido oirle mas s


da dentro, y cuatro hombres salieron á que las de «si estaria , pronto bue
recibirle cuando supieron por el guia no.» Entonces aprovechaba Mendez Pa
que era el facultativo que esperaban. checo la ocasion de entablar alguna
Introdujéronle en un cuarto interior conversacion dándole buenas esperan
donde habia una cama con finas sábanas, zas de su salud y haciéndole algunas
y en ellas tendido un hombre cubierto preguntas indirectas; empero el enfer
el rostro con un antifaz de tafetan par mo, siempre muy sobre sí, callaba.
do. El rostro del enfermo permane De todas sus observaciones físicas
ció constantemente cubierto mien solo pudo sacar el médico que el herido
tras le hizo la cura de una herida que era un jóven, mas no pudo oir pronun
tenia en la pierna derecha junto á la ciar su nombre á ninguno de los cua
¿ unos seis dedos mas arri tro que le acompañaban. La herida se
del tobillo. Aquella herida parecia cicatrizó y llegó el momento de darle
causada por arma arrojadiza; no era por sano. Entonces recibió las gracias
reciente sino inveterada y cubierta de de los cuatro compañeros del enfermo,
una úlcera próxima á gangrenarse. que le despidieron sin darle gratifica
Preguntó el médico que sistema curati cion alguna y sí solo un ¿? verbal
vo se había seguido en aquella herida para doña Francisca de Calva, repitién
que ya contaba algunos meses. Sin dole las gracias por el oportuno auxi
contestarle una palabra, le presenta lio que les habia prestado.
ron una preciosa cajita de plata en la Salió el médico de la alquería de
ue habia un ungüento; reconociólo el terminado á volver á verá doña Fran
acultativo y preguntó si aquello solo cisca para que le aclarase sus dudas, y
se le habia aplicado, y uno de los cua se presentó en su casa, y cuando la
tro hombres, que allí estaban contestó manifestó sus sospechas de que el que
que era lo único, por haber tenido que él habia curado era el rey don Sebas
gaminar mucho y ser imposible el pro tian, se sonrió alegremente aquella se
porcionarse, otras medicinas. Lo ter ñora informándose del estado del en
minante de esta contestacion, el estu fermo y preguntándole si entre los que
# que con él observaban, le acompañaban habia visto á su mari
hicieron comprender al médico que do Tabora.
nada ¿ ni lograr averiguar; El silencio de esta señora, el mis
y asi emprendió en silencio la cura terio con que se habia rodeado la cura
254 CAUSAS CELEBRES,
=

del enfermo y la pregunta que le ha año de 1580, sin que las córtes acaba
bia hecho de si habia visto con el en sen de decidir la cuestion de la re
fermo á Tabora, acabaron de confirmar gencia.
al médico en que el hombre á quien Los cinco gobernadores del reino,
habia prestado sus servicios era el mis que por el testamento tomaron el go
mo rey don Sebastian de Portugal. Tan bierno de Portugal, comenzaron por
arraigada estaba en la creencia del enviar á Felipe II, embajadores, ro
pueblo que el rey no habia muerto. gándole que no apelase á las armas,
Una indiscrecion del médico hizo y que aguardase á la decision de las
referir á algunos de sus amigos aquella córtes. El rey de Castilla, firme en
estraordinaria aventura esponiéndoles su derecho, y fiado en el poderoso
sus dudas; y lo que el médico habia auxilio de sus armas, se negó á reco
dicho en tono dubitativo, adquirió, pa nocerlos como jueces competentes, y
sando de boca en boca, el carácter de los hizo responsables de las desgracias
la certidumbre y de la evidencia. Pro que se siguiesen al reino si inmediata
palóse por todas partes que el licen mente no le reconocian.
ciado Mendez Pacheco habia curado Entretanto el prior de Crato, don
de una herida al rey don Sebastian; y Antonio, que se hallaba condenado á
esta creencia se arraigó de tal modo destierro, se presenta en Portugal apo
que hasta en las mismas córtes del yado por la Francia, la Inglaterra y
reino se presentó un escrito en que se el papa, logra entrar en la villa de
aseguraba esto. Santaren acompañado de gente sedi
El cardenal-rey vió el peligro que ciosa y rebelde, y procura ganar algu
habia en dejar correr esta noticia que nos de los procuradores de las córtes.
iba creciendo y aumentándose de un El clero inferior, especialmente los
modo considerable, temiendo sus con frailes, se declaran por don Antonio;
secuencias con el carácter del pueblo, proclaman audazmente sus derechos,
propenso siempre á moverse y agitar y se presentan armados para soste
se. Mandó prender al licenciado Men nerlos.
dez Pacheco; contó éste lisa y llana El prior de Crato se hace consagrar
mente lo que le habia sucedido, no so rey de Portugal en Santaren por el
lo delante del juez, sino ante el mismo obispo de la Guardia el 18 de junio,
cardenal-rey, que quiso oirlo de su asistiendo á este acto el nuncio de Su
propia boca. Santidad, con las mismas ceremonias
No resultaba prueba alguna de que que los reyes legítimos, reuniendo las
el médico hubiese sido el autor del es gentes del pueblo fanatizadas con las
crito que se habia presentado á las cór predicaciones de los frailes, que cami
tes; pero por divulgador de aquella naban dirigiendo las turbas con el cru
noticia subversiva y alarmante, fué cifijo en una mano y la , espada en la
condenado á ir á una galera con una otra; forma un cuerpo de treinta mil
cadena al pie. Moderóse despues esta hombres, y con ellos se dirige sobre
ena quitándole la cadena y dejándo Lisboa, cuya capital ocupa haciendo
e en la enfermería de la galera al cui huir á los gobernadores del reino á Se
dado de los galeotes y marinos enfer tubal, de donde á poco tiempo despues
mos. Este castigo acalló por el pronto fueron tambien arrojados por las tro
los rumores populares; pero dejó pro pas del rebelde prior, teniendo algunos
fundamente grabada en el ánimo del de ellos, para salvarse del furor del
¿ la idea de que vivia don Se populacho, que arrojarse por las ven
astian, que se hallaba escondido y er tanas y buscar un asilo en el Algarbe,
rante, atribuyéndolo muchos á una pe desde donde escribieron una proclama
nitencia que se habia impuesto por un exhortando al reino á que reconociese
cierto número de años en espiacion de á Felipe II, como su único y legítimo
su temeraria empresa y de haber des soberano.
oido los prudentes consejos de las per Felipe II, resuelto á sostener sus
sonas sensatas del reino. derechos con toda la energía propia de
Cortísimo fué el reinado de don En
su carácter, al paso que hacia ofrecer
rique, que murió el 21 de enero del por medio de su embajador en Portu-,
EL FINGiDO REY DE PORTUGAL. 255
E

gal, el duque de Osuna, que conserva Ante todo determinó que la dama,
ria los fueros, privilegios y libertades doña Magdalena de Guzman, saliese de
de los portugueses, se dispuso á apoyar palacio y fuese depositada en el con
sus derechos con un poderoso ejército. vento de Santa Fé de Toledo. Hizo que
En efecto, en Badajoz se reunió un el duque de Alba le diese seguridad de
ejército de treinta mil hombres con que su hijo no se casaria con ninguna
ochenta piezas de artillería, y al mis otra, y entabló la formacion de un pro
mo tiempo una escuadra á las órdenes ceso por medio de una junta, á que
del marqués de Santa Cruz, don Al hemos visto era muy inclinado, ponien
varo de Bazan, se dirigia sobre Lisboa do al frente de esta junta al presiden
en combinacion del ejército. te del Consejo de Castilla, don Anto
La opinion pública designaba para nio Pazos y Figueras, y nombrando pa
el mando de este ejército al duque de ra ella á Mateo Vazquez, el célebre juez
Alba, aquel consumado general que de Antonio Perez, á otros varios, y al
acababa de hacer la guerra en los es indispensable fray Diego de Chaves,
tados de Flandes; pero el duque de Al su confesor.
ba se hallaba en la desgracia de su Sobrevinieron los acontecimientos
soberano; se hallaba preso en su villa que hiciera necesaria la marcha del du
de Uceda por haber favorecido como que de Alba á someter los estados de
padre á su hijo primogénito don Fadri Flandes, y el duque llevó consigo á su
que, el que se hallaba arrestado por ¿ cuyo auxilio le fué sumamente
útil.
haber escitado el enojo del rey que lo
habia recluido en un castillo por un Entretanto seguia la junta una
desacato cometido en el palacio, y una correspondencia activa con el rey so
ofensa inferida á una de sus damas. bre este negocio, hasta que en el año de
Curiosa es esta causa tambien por 1578 cuando se hallaba en Madrid el
la importancia que le dió Felipe II. duque de Alba, volvió á suscitarse de
En el año de 1572, antes de que el nuevo y con mas actividad, porque do
duque de Alba hubiese marchado á ña Magdalena de Guzman escribia al
Flandes á someter aquellos paises, su rey carta sobre carta lamentándose de
hijo primogénito don Fadrique de To su suerte, haciendo ver las desventu
ledo, marqués de Coria, se habia ena ras y los trabajos que por espacio de
morado, perdidamente de una de las doce años habia sufrido en su reclusion,
damas de la reina doña Ana, cuarta es y solicitando pusiese un término á este
posa de Felipe II. Para lograr su inten negocio obligando á don Fadrique á
to habia como jóven y enamorado com cumplir su palabra, porque de lo con
rometídose con la dama, doña Magda trario quedaria quebrantado el empe
ena de Guzman, bajo palabra de matri ño y la palabra dada por el rey, y per
monio. dida la honra y, reputacion de aquella
Pasábanse los dias, y don Fadrique señora que tan bien le habia servido.
de Toledo no trataba de cumplir su Felipe II vuelve á insistir en el ma
palabra. A las amorosas exigencias de trimonio: resístese el marqués, y es en
aquella poderosa señora se negó rotun cerrado en el castillo de Tordesillas,
damente. Entonces la dama acudió en mientras que la junta creada para en
queja al rey Felipe II prorumpiendo en tender en este negocio consulta casi
lastimosas quejas contra su amante. diariamente con el rey sus acuerdos, á
El rey Felipe II, cuyo celo por la severi los que, segun su costumbre, contesta
dad de las costumbres y por los pre de su Pºd letra.
ceptos de la religion han podido cono En uno de los dias en que con mas
cer nuestros lectores en las diversas calor y ahinco, pero con un profundo
causas de que nos hemos ocupado, se secreto, estaba trabajando para hacer
irritó altamente; era como una ofensa que se cumpliese la palabra de matri
hecha al decoro de su palacio y á la monio que habia dado don Fadrique de
dignidad de su persona el trato que ha Toledo, su padre el duque de Alba, con
bia tenido don Fadrique de Toledo, y aquella arrogancia que le era propia,
resolvió adoptar una determinacion se que le habia iaspirado su alta posicion
Vela.
y el haber sido un verdadero rey por
256 CAUSAS CELEBRES,
-= -
=s

tantos años en los Paises Bajos se pre de residir en Uceda ó Talafhanca, pro
sentó al presidente del Consejo Pa vincia de Guadalajara, ¿d á
zos, y le manifestó que era infructuoso prision á varias personas que apare
y váño el empeño que se habia formado, cian cómplices en el negocio, particu
que nada se lograria en aquel asunto, larmente á dos amigos íntimos del du
porque su hijo habia celebrado su boda que, que eran don Esteban Ibarra y don
con doña María de Toledo, su prima, Francisco Albornoz.
autorizado él para eso por una carta y El secretario de Estado, Martin Gaz
cédula real, por la cual se le habia le telu, el dia 10 de enero de 1579 fué á
vantado el pleito homenage que tenia he casa del duque de Alba á las ocho de
cho de no casar á su hijo sin la licen la noche, y le intimó la órden del rey
cia espresa de S.M. para que en el término de cuatro dias
Atónito el presidente, Pazos con saliese de Madrid para su prision de
aquella manifestacion se dirigió á Fe Uceda, de la cual no habia de poder
lipe II; pero éste, siguiendo siempre salir sin su licencia y mar: dado, so pena
su costumbre del disimulo y de la di de la su merced y de otras penas á S. M.
lacion jamás contestó al presidente de bien vistas, y tenga por carceleria la
una manera terminante, si habia dado dicha villa como es las casas sin salir
ó no semejante real cédula, y solo se fuera de la poblacion de ellas y que en
limitó á una constante y perpétua eva estos dias que se le dan de término pa
siva. ra ir á la dicha villa no salqa de su casa
Indudablemente el duque de Alba ni vaya á otra parte sino á donde se le
se hallaba relevado de la obligacion m6171.0101.
que habia contraido con el rey: esto Trató al pronto el duque de eludir
era muy posible; era muy activa y se el mandato real pretestando hallarse
creta la correspondencia que por mu enfermo , de la gota, pero conocia
chos años habia mediado entre el mo demasiado el carácter de Felipe II y
marca español y su lugarteniente en con mejor acuerdo aquella misma no
los Paises Bajos. - che hizo apresuradamente los prepara
Sin embargo, Felipe II hacia que se tivos del viage, y al dia siguiente en un
continuasen con actividad las diligen coche con su muger salió de Madrid
cia en favor de doña Magdalena de Men yéndose á comer á Barajas.
doza, si bien con el mas profundo se Triste y desconsolado marchó el
CretO. duque á su prision. Sin duda al entrar
Un dia cuando se estaba averiguan en su coche por órden de Felipe II com
do si era ó mo cierto el nuevo casa pararia su situacion de pocos años
miento que habia revelado el duque de antes cuando verdadero rey de los Pai
Alba, don Fadrique escapándose de la ses Bajos á una palabra suya caian las
rision de Tordesillas en que se halla mas poderosas cabezas de aquel reino,
¿ vino ocultamente á Madrid, y se Felipe le mostraba el mayor afecto, los
alojó por tres dias en casa de su padre. monarcas de Europa le trataban casi
Entonces corrió la voz de que habia como á su igual, , y el mismo pontífice
venido á velarse, y que su padre habia le enviaba el sombrero y el estoque ben
sido testigo de esta ceremonia religiosa. dito como se acostumbra con los reyes.
La noticia de que habia venido á Instable mudanza de la fortuna, tantas
Madrid don Fadrique produjo en el áni glorias, tantos grandes servicios se
mo del rey la mayor irritacion; vió en eclipsaron ante los livianos amoríos de
ella un insulto á su autoridad soberana, un jóven y las quejas de una poco re
y los individuos que componian la junta catada y honesta dama de la córte!...
creada para entender en este negocio El poderoso duque de Alba, el hom
se exasperaron de tal modo que dic bre á quien se habia levantado una
taron el siguiente fallo: , Que quedase magnífica estátua de bronce sobre la
reso é incomunicado el marqués en ciudadela de Amberes, fué á una pri
as cárceles de la Mota, á donde poco sion á Uceda, y su hijo á su encierro
antes se le habia destinado; que el du incomunicado en los calabozos del cas
ue de Alba y su esposa saliesen des tillo de la Mota en Medina.
terrados de la córte, con mandamiento Preso debia permanecer el soberbio
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL, 257
s-E-E===E=

dominador de los Paises Bajos en Uce monumento inmortal del Escorial, esa
da un año y un mes, hasta que la glo octava maravilla, que gigante de las
ria viniese á llamar á las puertas de artes, se ostenta en los campos de Cas
su prision para pedirle que conquista tilla.
se una nueva y poderosa monarquía El Consejo real se dirigió el 15 de
para el severo rey, que por tan le febrero de 1580 por medio de su pre
ves causas asi trataba al mas grande sidente Pazos, obispo de Avila, a Feli
capitan de su época. pe II proponiéndole nombrase por ge
La inconsiderada doña Magdalena de neral de la espedicion de Portugal al
Guzman, causa de este escándalo, perdi duque de Alba sacándole para este
da la esperanza de enlazarse con don Fa efecto de la prision en que se ha
drique de Toledo, porque la junta que llaba.
entendió en este negocio manifestó que Notable es este documento que se
era imposible continuar en esta preten halla en el archivo de Simancas en el
sion interin viviese doña Maria de Tole patronato eclesiástico, legajo núm. 1 ,
do, porque don Fadrique no se podia y el que por su importancia trascri
apartar de ella, y era su marido mien bimos.
tras el uno de ellos viviese, solicitó del
nuevamente rey el volver al servicio S. C. R. M.
de la real cámara.
Felipe II se negó á esta solici Tambien esta mañana todo el Con
tud, segun la contestó terminante sejo comenzó á tratar del negocio tan
mente el presidente del Consejo, Pa grande que agora V. M. tenia entre
zos, diciéndola que la estaria me manos, y de lo que públicamente se
jor seguir en el convento en que dice que V. M. se ha declarado general
a habia colocado el rey y en que se de la jornada é que irá en persona á
hallaba recluida hacia doce años, que ella; y discurriendo en esta plática les
su presencia en palacio era inconve paresció á todos estar obligados, ansi
miente por haber en ella servidores de por ser vasallos como por ser criados
ambas familias, y el adusto presidente y consejeros, decir á V. M. lo que sen
obispo de Avila con bruscos modales, tian desto que se decia, encargándome
indignos del trato para una dama de que yo de su parte y de la mia lo re
su calidad, y tal vez harto de tan enojo presentase á V. M. como lo hago en es
so negocio, le decia que para dama era ya tos pocos renglones. Considera mucho
vieja, y muy moza paru dueña, pala el Consejo la gravedad é importancia
bras groseras, que aumentaron la amar deste negocio; pero mucho mas la se
gura de aquella distinguida señora, guridad de la real persona de V. M. y
que al perder las ilusiones de su amor, lo que de su vida y salud depende,
veia con tristeza la pérdida de su li que es el ser de todos sus reinos y esta
bertad, pagando bien caro un desliz de dos, y el universal de la religion cató
su juventud (1). -
lica. Represéntanle las muchas ocasio
Reunido el ejército espedicionario nes que en una jornada como esta sue
en Badajoz creian todos que pensaba len ofrecerse y acaescer en que la vida
ponerse á su cabeza el mismo Felipe II, y salud de V. M. podia ponerse en mu
empero Felipe II no era como su padre cho riesgo y peligro, no solo en los ac
Cárlos V. Una sola vez se habia pre tos propios de la guerra, pero en el
sentado armado de pies á cabeza delan trabajo y cansancio della, en malos
te del enemigo, y á distancia que no alojamientos, en desconciertos de al
podia ofenderle en la batalla de San guna gente mal disciplinada, y en infi.
Quintin en 1557, victoria debida al nitos disgustos que por momentos sue
acierto y valor del duque de Saboya. len acaescer, de los cuales se siguen
Victoria á la que levantó Felipe II el indisposiciones que causan la muerte
ó ponen muy á punto della. Y aunque
(1) Todos los documentos de esta causa, semejantes infelices y tristes sucesos
que dió motivo á la prision del dique de Al. no se han de esperar, en especial mo
ba y de su hijo don Fadrique, se hallan en el
legajo 5.º del patronato eclesiástico en el viéndose V. M. con tanto derecho y
Archivo de Simancas. jºrn
justicia á esta
3
todavía es bien
258 CAUSAS CELEBRES.
==

considerarlos y creer que pueden ve allí é sirva en esta jornada, que casi es
nir. Atento á todo esto el Consejo y yo dárselo por pena, como cuando man
humillamente suplicamos á V. M. como dan á uno que vaya con su persona á
lo debemos á nuestra obligacion, sea servir en una frontera. Vemos el gran
servido no poner su real persona en de descontento que entre todos los solda
tant0 ¿ trabajo, pues tiene va dos hay de no entender quel Duque ha
sallos que podrán hacer la jornada de ya de ir por cabeza ó lugarteniente,
tal manera que se consiga el efecto que con cuan mayores é alegres ánimos irán
se pretende; y mayores se siguirán sabiendo que V. M. se sirve dél. No
quedando V. M. en su reposo, dando quiero cansar mas á V. M. en acumular
órden y calor á lo que fuere necesario causas y razones que al Consejo y á mí
que hallándose en persona en el cam han movido á hacer este recuerdo,
po, pues es cosa cierta que el mayor pues son notorias; y concluyo suplican
¿ de la gente y mas granada se ha do á V. M. les dé orejas y haga esta
e ocupar en la guarda de su real per merced á todos estos sus reinos. De
sona, la cual si alli está ocupada no Madrid á 15 de hebrero de 1580.
podrá proveer á las cosas que cada dia
son necesarias al campo é sin las cua Al márgen de esta consulta, que de
les no se puede sustentar. Y para esto bió sin duda ser una cosa préviamente
se deja tocar con mano, justo es que acordada entre el rey y el presidente
V. M. lo abrace y reciba por sano y se para no dejar ver Felipe II que cedia
guro consejo de sus vasallos y criados, entre la imperiosa necesidad en que se
y se sirva consolarnos con escusarse hallaba de los talentos y pericia de su
deste trabajo, encomendándolo á per antiguo general, escribió cual era su
sona esperta y fidente que lo sepa lle costumbre de su propio puño y letra
var adelante, é salga con lo que se pre esta contestacion.
tende.
E cuanto V. M. por sus prudentes «Yo os doy muchas gracias por lo
y secretos designios, todavía resolvie ue aqui decis, que se deja bien enten
se de ir, sea llevando lugartiniente er el celo de que procede; pero has
que haga sus veces y escuse sus tra ta entender mas como están las cosas
bajos. Esto es lo que todos los prínci de Portugal y lo que segun el estado
pes tan grandes como V. M. han hecho de ellas fuere menester que se haga,
en sus jornadas, y la buena memoria seria muy fuera de tiempo tratar agora
del Emperador nuestro señor y V. M. mas de aquello que no se puede escu
en las en que se hallaron ansi lo hi sar; de manera, que de lo uno depende
cieron. lo otro. Y cuando lo de alli obligare á
De cualquiera destas dos maneras entrar en los puntos de mayor consi
que V. M. resolviere su ida ó quedada, deracion, se atenderá á ellos y se hará
parece al Consejo que ninguna persona lo que pareciere mas conveniente para
de las que hoy conocemos es mas con todo.»
veniente y á propósito que la del du
que de Alba por las causas y razones A los pocos dias vieron todos no sin
que todo el mundo sabe, en el cual se— asombro y admiracion que Felipe II ha
rá cosa de grande maravilla que te bia enviado al mismo ministro Gazte
niéndolo V. M. en España y tan acerca lu, que un año antes habia notificado
de sí se mueva hacer jornada sin él, su prision al duque de Alba, para pre
juzgando todo el mundo que de seis mil guntar si se sentia con la salud y ac
eguas, siendo vivo, le debria mandar tividad necesaria para ponerse al fren
llamar. Bien sabe y ve el Consejo el te del ejército reunido en Badajoz y
justo desdeño que V. M. tiene del du conquistar el Portugal.
que, y con mucha razon está en donde El anciano duque de Alba no fué
se le ha mandado; pero considera lo sordo al eco de la gloria que venia á
muclio que se atraviesa en el negocio llamar á las puertas de su injusta pri
presente, y que á trueque de no errarlo sion, sintió hervir su sangre española
ó que dél no sucedan mayores daños é el vencedor de Saulverg, y olvidando
inconvenientes, es bien que salga de los agravios no merecidos que le habia
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL. 250
-
E -

ocasionado el rey, contestó que jamás todavía permanecian presos en las cár
habia tenido en cuenta su reposo, ni celes de Madrid.
atendido á su salud para servir á su Mas trabajo le costó el conseguir el
soberano. alivio de su hijo don Fadrique de Tole
A los dos dias el duque de Alba era do, el cual hacia mas de un año conti
nombrado general en gefe del ejército nuaba enfermo y preso en el casti
que debia invadir el Portugal. llo de la Mota: al fin el presidente
Felipe II mostrándose siempre se Pazos y el confesor Fr. Diego de Cha
vero, recibiendo los mayores servicios ves, con quien Felipe II consultó, fue
como el cumplimiento de un deber co ron de dictámen en 11 de mayo de 1580
mun y ordinario, no permitió al duque de que se le permitiese á don Fa
de Alba al salir de Uceda que pasase drique de Toledo vivir con su muger
por Madrid, y al llegar á Vicálvaro le doña María de Toledo, bien dejándole ir
mandó una órden para que sin tocar en á Alba, ó bien dándole por cárcel á Me
la capital ni presentarse ante su vis— dina, con tal de que no pudiese salir del
ta marchase á Estremadura. Con razon punto que se le señalase sino á cierta
pudo entonces el duque de Alba decir distancia.
la feliz espresion que se le atribuye: Decia el presidente Pazos en la
Que el rey le enviaba encadenado á con consulta: que si don Fadrique no lo me
quistar reinos. recia por si, como es verdad, merécelo
Acorde está esta espresion con la por si muger que no pecó y es hija de
misma idea que espresaba el Consejo criado de V. M., y como Dios perdonó á
real en la consulta en que pedian al Nabal Carmelo por razon de su muger
rey nombrase al duque de Alba por Abigail, ansi será de V. M. Doña Ma
general del ejército de Portugal. ria, cuanto mas que él está tambien cas
Allí habrán notado nuestros lecto tigado é tan gastado de salud y ha
res estas espresiones: es bien que salga cienda que no se irá alabando del me
de alli, (la prision), é sirva en esta jor gocio.
nada que cuasi es dárselo por pena, co
mo cuando mandan á uno que vaya con Al pie de esta consulta escribió de
su persona á servir en una frontera. su puño Felipe II.
¡Qué poder el de un monarca que
impone á uno de sus súbditos por pena «Podrá ir á Alba con su muger y
que vaya á servirle mandando un ejér estar alli con una legua al rededor.»
cito y conquistándole un reino, ni mas
ni menos que como hoy se impone á Tan poco accesible se mostraba Feli
cualquiera delincuente el servicio de pe II aun en las circunstancias mas di
las armas en clase de soldado! fíciles, ni tenia con él influencia para
Mal pareció la severidad del rey, y él hacer torcer su voluntad aun en mate
mismo cediendo á la opinion, que aun rias de tan leve consideracion ante la
en los gobiernos absolutos es mas política, el hombre que iba á añadir uno
fuerte que los mismos reyes, cuando de sus mas bellos florones á la corona
marchó á Badajoz en el mes de marzo de dos mundos con que ceñia su cabeza.
siguiente con toda la córte á presenciar El hijo permaneció en su destierro
la invasion del Portugal, por la que se de Alba mientras el padre iba á plan
habian hecho rogativas públicas por to tar las banderas españolas sobre las
da España, no solamente le admitió á torres de Lisboa, á conquistar aquel
besar su mano, sino que le prodigó las reino y morir despues alli enmedio de
mayores pruebas de cariño en el alar sus triunfos sin tener el consuelo de
de que en la presencia de toda la córte abrazar á su hijo primogénito, al here
hizo el ejército en el campo de Canti dero de su gloria y de su nombrel
llana en el mes de junio antes de en El duque de Alba entró á princi
trar en Portugal. pios de junio con su ejército en Portu
El duque de Alba aprovechó su al, por haberse acordado que el rey no
vuelta al favor para pedir al rey la li iciese en persona la campaña ¿
bertad de sus fieles servidores, Este dase el éxito de la lucha en ajoz.
ban de Ibarra y Juan de Albornoz, que Las plazas de Yelves y Olivenza se en
260 CAUSAS CELEBRES.
=3.

tregaron sin combatir en cuanto se pre presa, empero decidido, á renovarla


sentó el ejército español. Lo mismo hi mas tarde.
cieron las demas poblaciones al Norte El duque de Alba hizo jurar por
del Tajo hasta Setubal. Entretanto la rey á Felipe II, que en Badajoz se
armada, á las órdenes de don Alvaro hallaba á las puertas de la muerte del
de Bazan, marqués de Santa Cruz, se catarro epidémico que ocasionaba
dirigia al mismo punto apoderándose grandes estragos en España, y del que
de Lagos y otras ciudades del Algarbe murió en 26 de octubre de 1580 su és
y del Alentejo. El duque de Alba se po posa, la reina, doña Ana.
sesionó el 22 de junio de Setubal, rin Restablecido de su enfermedad Fe
diendo despues el castillo con 80 piezas lipe II, entró en Portugal el año siguien
de artillería y algunos galeones. Defen te, el 16 de abril, y fué jurado y recono
dia su alcaide don Mendo de la Mota cido por rey de Portugal por los tres es
aquella fortaleza inespugnable que ca tados del reino en las córtes de Tho

àó Alba
en mano de los españoles. El duque
se dirige á Cascaes para desde
mar. Alli esperó á que se hiciesen en
Lisboa suntuosos preparativos para re
alli , marchar sobre Lisboa. Acomete y cibirle, haciendo su entrada solemne
rinde la ciudad y se apodera de su cas en aquella capital el 20 de junio.
tillo haciendo degollar en la plaza, pa— La sumision de Portugal habia au
ra aterrar á los portugueses, á su gober mentado el inmenso poder de la mo
nador don Diego de Meneses. narquía española con las ricas y gran
Lisboa, donde se hallaba el prior de des posesiones del Africa y de la India,
Crato don Antonio, trató de oponer la los reinos de Guinea, Angola y Benga
mas viva resistencia. El 25 de agosto la, las ricas ciudades de Goa, el Brasil,
se presenta el ejército español y sale á la costa del Malabar, la isla de Ceylan,
su encuentro el prior de Cra o en las las Molucas y Macao.
posiciones de Belen, con un ejército que Todo habia cedido ante el poder del
entusiasmaban los frailes fanáticos par monarca de Castilla; solo permanecian
tidarios del don Antonio. El duque de rebeldes las islas Azores, y en especial
Alba en combinacion con la armada la Tercera. Alli mandó una espedicion
del marqués de Santa Cruz, les da una Felipe Il; empero fué rechazada. En
batalla, los derrota completamente y tonces, el activo perturbador del rei
los hace huir, pasando á cuchillo a no, don Antonio, prior de Crato, que
de mil prisioneros que hizo en contaba con el auxilio de Francia é In
el d.
glaterra, preparó una escuadra y se
Don Antonio, herido, entra en Lisboa dirigió á aquellas islas, contando hacer
y tras él penetran los soldados caste de ellas la base de sus operaciones pa
llanos, que se apoderan de la capital ra la reconquista de Portugal. El mar
del reino de Portugal. El prior de Cra qués de Santa Cruz acudió con una es
to marcha fugitivo á Santaren, donde cuadra, batió la francesa que auxiliaba
apenas puede permanecer algunos dias, á don Antonio, y se apoderó de las is
en los que fué recibido como rey y se ve las pasando á cuchillo sobre tres mil
¿? á salir de alli. Acógese á franceses y ochenta caballeros portu
oimbra, saquea al pueblo de Aveiro, se gueses que seguian la bandera del
encierra en Oporto donde marchó á prior.
perseguirle el ejército español á las ór El rey Felipe II recibió el parabien
denes del valeroso don Sancho Dávila. de los mismos reyes que habian sido
En vano trató de fortificarse el prior de contrarios á la conquista del Portugal,
Crato en aquella ciudad, tuvo que sa y del mismo pontífice. Este, á instan—
lir de ella fugitivo por montes y bre cia suya, nombró un comisario apostó
ñas, para salvar su vida por la que ha lico que entendiese en las causas de
bia ofrecido ochenta mil ducados el du los frailes y clérigos que habian sido
que de Alba. los principales agentes del pretendien
Vagando anduvo todavía seis meses te don Antonio. Felipe II. á pesar de su
por entre las provincias del Duero y decantada religiosidad, procedió contra
Miño, hasta que pudo refugiarse en ellos con la mayor crueldad, castigán
Francia vencido en su temeraria em dolos con la pena de muerte, que se
EL FINGDO REY DE PORTUGAL 26
3-E

verificaba en secreto sin aparato alguno su entrada triunfal en Madrid como


por la noche en la cárcel, arrojando conquistador de un reino.
despues sus cadáveres al rio. Fray Miguel de los Santos, que ha
Mr. Weiss, en su España desde Feli bia sido desterrado como hemos visto
pe II hasta el advenimiento de los Bor de Portugal y residia en Madrid, de
bones, dice que perecieron de órden mostró tal arrepentimiento de su pro
de Felipe II mas de dos mil sacerdotes ceder, era tan humilde en su conduc
ó religiosos. Hizo deportar á muchísi ta con el rey, que, á pesar de la sus
inos de ellos, ó desterrádolos á diver picacia de este monarca, lo miró con
sos puntos de España. la mayor indulgencia mandando po
Entre otros, dirigió á Madrid en un nerle en libertad, y aun movido de
coche rodeado de ocho arcabuceros á sus virtudes quiso darle una prueba
un fraile agustino llamado fray Miguel del aprecio y estimacion que de ellas
de los Santos, hombre que gozaba de hacia nombrándole vicario del monas
gran reputacion de ciencia y virtud en terio de Santa María la Real de la villa
Portugal, que habia sido varias veces de Madrigal, de la órden de Santo Do
provincial de su órden, que fué predi mingo, encomendándole la direccion
cador del rey don Sebastian y confesor de doña Ana de Austria, su sobrina,
suyo, que despues habia ejercido igua hija natural de don Juan de Austria,
les cargos durante el corto, y efímero la cual se hallaba de religiosa profesa
reinado de don Antonio, del que era el en aquel monasterio.
mas íntimo amigo y particular confi A su muerte, don Juan de Aus
dente. Este fraile habia sido uno de tria en los Paises Bajos habia dejado
los que con sus consejos y sus fervo dos hijas muy jóvenes, Ana y Juana.
rosas exhortaciones habia sostenido Estas hijas, sobrinas carnales de Feli
mas el espíritu público en favor de pe II, habian sido tomadas bajo su
don Antonio. Era sin embargo, tal la proteccion; empero, como no queria
reputacion de ciencia y de virtud que que se propagase la raza de los bas—
tenia en el reino de Portugal, que es tardos, á quien siempre habia mirado
to le libró de no haber perecido co con el mayor horror, de que habia da
mo tantos otros religiosos, limitándo do pruebas al mismo don Juan de Aus
se Felipe II á enviarle preso á Es— tria, á pesar de sus altas cualidades y
paña. eminentes servicios que habia pres
La muerte sorprendió al duque de tado, ya sometiendo la rebelion de los
Alba á los setenta y cuatro años de su moriscos, ya venciendo en Lepanto,
edad en Lisboa. Su muerte, que se ve ya restableciendo la paz en los Paises
rificó en el mismo palacio del rey, fué Bajos, las habia destinado á ser reli
poco sentida y no mereció ninguna iosas.
demostracion ostensible del monarca, Ana de Austria habia nacido en
que no le queria bien. Nápoles de Diana de Sorrento, jóven
Deseaba Felipe II tornar á Madrid, italiana con quien habia tenido ínti
ya para atender á la guerra de Flan mos v amorosos tratos don Juan de
des, ya tambien para evitar su per Austria. La segunda, doña Juana, la
manencia en un reino donde sabia que tuvo de una noble señora de Madrid
era odiado. Encomendó el gobierno llamada doña María de Mendoza. Estas
de Portugal al archiduque y cardenal dos jóvenes fueron á espiar lo alto y
Alberto su sobrino, hijo de su herma noble de su nacimiento en el silencio
na doña María, emperatriz de Alema de un claustro. No se habia consultado
nia, á quien miraba como hijo, nom su vocacion para consagrarlas al ser
brándole un consejo para que le ayu vicio de Dios; asi es que, aunque re
dase. Dejaba, pues, un cardenal de re signadas, no vivian gustosas en el
gente al frente de un reino que acababa claustro.
de tener un re y cardenal. Doña Ana, á las gracias de su ju
El 11 de febrero de 1583 salió el ventud unia un candor y un carácter
rey de Lisboa llegando al monasterio tan angelical que era la misma inocen
del Escorial el 24 de marzo. Alli se cia; asi es que veremos cuán fácil
detuvo tres dias, haciendo despues mente fué la víctima de una de las
262 CAUSAS CELEBRES
=-re?

mas negras imposturas, y como su co Flandes, y la otra para proteger sus


razon, desprovisto de esperiencia y posesiones del Nuevo Mundo.
trato de mundo, dió entrada á una pa Reunida esta armada que recibió el
sion y se prestó á ser instrumento de nombre de invencible porque tal la su
una causa que hoy tendríamos como ponian todos, en el puerto de Lisboa, po
fábula ó invencion, si documentos cos dias antes de marchar, un funesto
auténticos que originales existen en el presagio vino á contristar los ánimos y
archivo de Simancas, no viniesen á detener por unos dias su salida.
comprobar cuanto afirmamos. Murió el almirante marqués de San
Hemos debido á la buena amistad ta Cruz, el mas famoso marino de su
del entendido é ilustrado historiador época, y fué nombrado para sucederle
de España, don Modesto Lafuente, una el duque de Medinasidonia estraño en
porcion de documentos inéditos que teramente á la marina; pero opulen
él mismo ha copiado en el archivo to y noble señor. Asi segun la elegante
de Simancas en los varios años que espresion de un antiguo historiador la
ha permanecido alli consultando los armada invencible recibió por un gene
documentos necesarios para escribir ral de hierro otro de oro.
su escelente obra, que ya en varias La escuadra salió de Lisboa el 29 de
ocasiones hemos hecho la justicia de junio de 1588. Avistó á la armada inglesa
elogiar. en Plimouth: mas en lugar de atacarla
Sometido el Portugal era gobernado como era el parecer de todos los capita
en paz por el cardenal-archiduque Al nes de mar, el duque de Medinasidonia,
berto. siguiendo estrictamente las instruccio
Felipe II no habia olvidado los nes de Felipe II de no romper las hostili
activos socorros que la reina Isabel de dades hasta que desembarcase el ejér
Inglaterra habia prestado al prior de cito del duque de Parma, pasó de largo.
Crato don Antonio de Portugal: veia los La armada invencible fué á anclar cerca
que contínuamente seguia suminis de Calais, de donde á pocos dias al salir
trando á los rebeldes de Flandes, man para embestirá unos cuantos buques que
teniendo vivo el fuego de la guerra ci. se habian presentado á su frente, fué aco
vil, y sobre todo la alianza formal que metida por una viólenta tempestad que
habia hecho con los protestantes fla haciendo chocar fuertemente las naves
mencos, á los que habia enviado á su fa unas con otras la disipó completamente
vorito el duque de Leicester. haciendo que los ingleses al dia siguien
Pensó Felipe II, justamente irrita lo te al verla dispersa la en vistiesen con
por todas estas causas, conquistar la In sus ligeros buques, haciendo prisioneros
glaterra, suponiendo que la Escocia le catorce buques á pesar del admirable va
ayudaria para vengar la muerte de su lor con que se defendieron los marinos
reina , María Estuardo á quien Isabel españoles, viniendo á estrellarse en las
acababa de hacer perecer en un cadal costas de Irlanda diez navíos con el va
so, contando con que los católicos se leroso Alonso de Leiva.
alzarian en masa á su voz recibiéndole Desde entonces la España perdió
como el protector general del cato la superioridad que le habia dado el
licismo. imperio del Océano. La España en
Resolvió, pues, Felipe una invasion, tonces á imitacion de lo que habia
hizo para ella inmensos aprestos, y hecho Roina despues de la derrota de
reunió los tercios en Flandes, nom Canas se vistió de luto general, siendo
bró generales de tierra á Alejandro menester que Felipe II mandase termi
Farnesio duque de Parma, y de mar al nantemente cesar las demostraciones de
célebre don Alvaro Bazan, marqués de público dolor y duelo. Aquel rey de al
Santa Cruz, empero al mismo tiempo, ma tan fria y de tan estóica serenidad, á
para encubrir sus intentos y adorme la noticia de tamaño desastre solo pro
cer a la reina de Inglaterra simuló va nunció estas palabras que ha conserva
rias negociaciones de concordia esten do la historia: Yo envié mis naves á lu
diendo la voz hábilmente de que una char con los hombres, no contra los ele
parte de aquellos terribles armamentos mentos y despues siguiendo su costum
se destinaban contra los rebeldes de bre religiosa, dió gracias á Dios de que
EL FlNGID0 REY DE PORTUGAL. 263
-E.

aun le hubiesen quedado recursos para ble, sin mas recursos que una módica
soportar tan gran pérdida. pension , que le concedió la generosa
Cuando las tropas del duque de Par piedad de Enrique IV. Aun allí y des
ma iban á darse á la vela en Dunquer pues de tan terribles desengaños prose
que llegó la noticia el desastre de la guia en una activa correspondencia con
gran armada. sus parciales: uno de los mas principa
Aquel infortunio reanimó las espe les era fray Miguel de los Santos, el vi
ranzas del prior de Crato don Antonio, cario de las monjas dominicas de la villa
que al ver destruido casi el poder ma de Madrigal, el hombre á quien la vi
rítimo de la España y ocupadas las tro lla, el convento y la sobrina de Feli
¿ españolas en las guerras en que se pe II, doña Ana de Austria, tenian por
allaban empeñadas á la vez en Francia un modelo de virtud y de santidad.
los Paises Bajos, solicitó de la reina Isa Fray Miguel de los Santos mantenia
bel de Inglaterra un ejército y una es siempre una idea fija en su cabeza: la
cuadra al año siguiente de 1589 para de la restauracion en el trono de Por
conquistar el Portugal persuadiéndola tugal de don Antonio. Esta idea, obje
de que odiando aquel reino á Felipe II to de sus meditaciones y desvelos, fun
y sin fuerzas éste para resistirle todos dábase en la creencia universal que
se declararian por él en cuanto se pre existia en el reino de Portugal de que
SeIntaSe. aun vivia el rey don Sebastian, idea
La reina Isabei que odiaba á Felipe II, que lejos de disminuirse con el tiempo
dió á don Antonio una escuadra de permanecia cada vez mas viva en el
ciento veinte bageles con su correspon ánimo del pueblo por el cuidado que en
diente ejército, previo un tratado en que mantenerla tenian los enemigos de la
el pretendiente al trono de Portugal con dominacion de España.
cedia á la Inglaterra las mas ventajosas Aquel pobre fraile estrangero, vi
condiciones. Creia breve la conquista viendo, bajo la vigilancia de Fclipe II,
de Portugal don Antonio, el que acom reducido á permanecer en el oscuro
pañado del general de la armada Drake ueblo de Madrigal, encontró sin em
y el del ejército Enrique Norris, salió ¿ en la travesura de su genio y su
en la escuadra el 13 de abril de Pli gran talento, medios para tramar una
mouth y llegó á la vista de la Coruña farsa que llegó á inspirar los mas vivos
el 4 de mayo de 1580. Intenta un ataque recelos al poderoso monarca Felipe II;
contra esta plaza y rechazado prosigue farsa que estuvo á punto de tomar in
su derrotero á Portugal, hace alto en mensas proporciones y que dió orígen
Peniche y desde allí Norris avanza con á la formacion del célebre proceso de
el ejército hasta cerca de Lisboa acam que nos ocupamos.
pando en las alturas de Belen mientras Mil proyectos revolvia en su mente
la escuadra se dirigia á Cascaes. el fraile agustino para encontrar el me
Lejos de unirse os portugueses á las dio de favorecer al pretendiente don
banderas del pretendiente, permanecie Antonio, pero la casualidad le hizo en
ron pasivos, y el cardenal-regente y el contrar uno en el año de 1594. Habia
conde de Fuentes, general en gefe del venido á establecerse en la villa de
ejército, mantuvo la capital y arrojó á los Madrigal un hombre que, aun cuando
ingleses que habian penetrado en los ar en sus vestidos manifestaba ser un
rabales. En vano la escuadra se mantu hombre vulgar, revelaba en la nobleza
vo algunos dias aguardando un pronun de su rostro y en la finura de sus mo
ciamiento; tuvieron que retirarse vién dales, ser un hombre de un nacimiento
dose engañados por las falsas promesas snperior al oficio que habia venido alli
del pretendiente y darla vuelta á Ingla á ejercer. Habia establecido en aquella
terra en el mes de junio con pérdida de villa un horno de pastelería, empero el
la mitad de su gente, sin mas éxito que ejercicio de esta profecion mas parecia
haber incendiado un arrabal de Lisboa un pretesto que un medio verdadero de
y volado al castillo de Cascaes. subsistencia. Trabajaba pocas veces en
No quedó ya otro medio al turbulen la semana; cuando se llegaban á él los
to don Antonio que volverse á Francia compradores daba los pasteles por una
para arrastrar una vida triste y misera mitad de su valor, mostrando en la es
264 CAUSAS CELEBRES.
==

pendicion de sus géneros un desprendi Insistió el fraile rogándole que no le


miento y una generosidad que no era negase lo que él tan bien conocia, porque
comun en las gentes de su oficio. Nadie ya habia llegado el tiempo de que ter
sabia su procedencia, era sumamente minando su peregrinacion debia volver
reservado en su trato, y vivia concen á subir al trono de Portugal, en el que
trado en su familia compuesta única todos sus vasallos le aguardaban.
mente de una niña hermosa, de unos En vano juró Espinosa una y otra
dos años, y de una muger jóven que vez de que él no era semejante rey, y
pasaba por ama ó nodriza de la niña, á que era necesario poner término óá
quien llamaba Clara. aquella burla del religioso, ó á aquella
Pasando un dia por delante de la equivocacion en que podia haber in
tienda de pastelería de Gabriel de Es currido.
pinosa, que era el nombre con que es Fray Miguel de los Santos manifes
te hombre desconocido se habia pre tó entonces que era tal la semejanza
sentado en Madrigal, quedóse parado y que tenia el pastelero con el rey don Se
lleno de sorpresa fray Miguel de los bastian, á quien habia conocido por mu
Santos al ver la persona de éste: pare chísimo tiempo como su confesor que
cia como quererle reconocer. Fué tal habia sido, que era imposible que cual
la sorpresa que se pintó en el rostro del quiera que hubiese conocido al rey no
fraile, de tal modo fijó sus miradas es le tomase por tal. Le enumeró las cuali
crutadoras sobre el pastelero, que no po dades, el carácter, el genio, las costum
dia menos de llamar la atencion de éste. bres , y puntos , de contacto que tenia
Preguntóle el pastelero que era lo con don Sebastian; y Gabriel de Espi
que tanto le llamaba en él la atencion, y nosa no pudo menos de quedar conven
si podia en algo complacerle. Al mismo eido enteramente de su completa seme
tiempo el fraile agustino, como hablán janza con el rey. Permaneció allí toda
dose á sí propio, espresó que su mirada, vía despues de esta declaracion, hablan
sus maneras, el eco de su voz, todo le do de cosas indiferentes con el pastele
recordaba y le hacia ver que tenia en ro, suscitando diversas conversaciones
su presencia á don Sebastian. con el objeto de examinar el talento y
Entonces el pastelero le dijo que su la capacidad de éste, y procuró inspi
nombre era Gabriel y no Sebastian. El rarle la mayor confianza con el objeto
religioso, que habia entrado dentro de de intimar con él y estrechar sus rela
la tienda, se le arrojó de rodillas, y le ciones.
suplicó que dejase con él el disimulo, Confuso y meditabundo quedó con
porque aun cuando se hallaba algo des aquella escena inesperada y sorpren
figurado por los trabajos que habia pa dente el pastelero Gabriel de Espinosa.
sado, él conocia perfectamente al rey El fraile se retiró á su convento, é in
don Sebastian, á quien se creia muerto mediatamente en su imaginacion formó
en Africa, pero que él sabia que esto el plan con el que creia poder volverá
no era cierto, y que el cielo le habia colocar en el trono de Portugal á don
concedido por último la dicha de besar Antonio, prior de Crato, y libertar á su
su mano; y al mismo tiempo se la cogia pais de la dominacion española. El frai
y con la mayor efusion estampaba en le habia encontrado la resolucion del
ella sus labios. problema que por tantos años habia si
El pastelero empezaba ya á incomo do su idea única, fija, esclusiva. En su
darse, no pudiendo comprender si contento esclamaba con Arquimedes:
aquello era una burla, ó si se habia Eureka, le he encontrado!
vuelto loco el religioso, no cabien En efecto, habia encontrado lo prin
do en su ánimo que un hombre del jui cipal para su objeto, la persona del rey
cio y de la autoridad y virtud en que á quien en Portugal se suponia escon
era tenido fray Miguel tratase de bur dido ó peregrinando por reinos estran
larse: asi es que haciéndole levantar geros. Trató pues de asegurar para este
del suelo le rogó que pusiese término á re y el apoyo de una persona rica y po
aquella chanza, manifestándole que él derosa, que pudiese suministrar los
sabia muy bien que no era el rey don medios de llevar adelante su atrevid a
Sebastian. conspiracion, y la halló en la persona de
EL FINGlD0 REY DE PORTUGAL. 263
=

doña Ana de Austria, aquella señora todos los dias hablaba á doña Ana del
jóven, sencilla, cuya conciencia estaba rey de Portugal, le refirió la aventura
¿ dirigir, y que sin vocacion al del médico Mendez Pacheco, cuando ha
una para el claustro en donde la ha bia ido á curarle á, Guimaranes; y ha
¿ sepultado la política de su tio Feli blándole de ello todos los dias, pintán
pe II, le encomendaba casi todos los dole las circunstancias de don Sebas
dias que pidiese á Dios en la misa por tian, llegó á fanatizar de tal modo á la
ella, y le mostrase qué es lo que habia sencilla monja, que ésta tampoco tenia
de ser mas conforme á su servicio. mas idea fija y esclusiva que el ver en
La cándida y sencilla doña Ana era su dia al rey don Sebastian.
una mina inapreciable que podia esplo . Y, esto no debe causarnos estrañeza
tar el religioso para sus proyectos: qui ni admiracion. En el proceso mismo
so hacer de ella un instrumento pode en un documento original que existe
roso para sus planes, y reservando su en el archivo de Simancas, leemos las
proyecto comenzó á alucinarla con re revelaciones que fingió Fr. Miguel de
velaciones que decia haber recibido de los Santos y que declaró la misma sen
Dios acerca de su estado, mostrándole cilla doña Ana en la causa, y que nada
el Señor en perspectiva para esposo un tenia de estraño fascinasen y volviesen
rey poderoso, gloria de la cristiandad, la cabeza de una débil muger inesperta
y que este rey era don Sebastian de encerrada en un claustro, y deseosa de
salir de él.
Portugal.
En vano aquella señora le manifes Ilé aquí el documento.
tó que no podia ser eso, cuando todos
sabían que don Sebastian habia muerto Revelacion de Fray Miguel de los San
en los campos de Africa, que no tenia los para engañar á doña Ana de Aus
hijo ninguno, y que su descendencia tria (1).
habia terminado con él siendo por esta
causa rey de Portugal Felipe II. Por el mes de agosto del año 93 por
Entonces Fr. Miguel de los Santos, la octava de San Lorenzo, comenzó el
con la destreza propia de un hombre de padre Fray Miguel á tratar con su exce
talento, con la autoridad y prestigio de lencia de las revelaciones que decia
un confesor en un alma sencilla y cán que tenia, pidiéndole su excelencia
dida, le hizo ver que don Sebastian no que la encomendase á Dios y dijese
habia muerto, que vivia, y aparentan misas por su intencion cerca de la des
do gran temor por las revelaciones que conformidad que tenia con este estado
le hacia; le dijo que él sabia que el rey de monja, para que nuestro Señor la
don Sebastian, despues de la derrota inspirase lo que fuere mas servicio
del Alcazarquivir, herido y disfrazado, su yo.
habia podido huir de aquella sangrien Aquel mismo dia de la octava de
ta jornada; empero que al verse derro San Lorenzo dijo, que estando diciendo
tado, al ver que por su obstinada ter misa en el memento oia una voz que le
quedad habia sacrificado la flor de la dijo: déjala estar, tres veces, que ansi
nobleza portuguesa, habia hecho un la quiero. Y dijo que, suplicando á Nues
voto, y que aquel voto indiscreto le im tro Señor le declarase lo que era aque
pedia volver á Portugal, andando er llo; dice que le dijo Dios que él tenia
rante, desconocido, sin medios, sin guardada á su excelencia para gran
recursos, y espuesto á mil peligros. des cosas de su servicio.
Grande fué el contento y la sorpre Otro dia dijo en el mismo mes que
sa con que doña Ana recibió la noticia entrando á decir misa vió en el altar
de que aun vivia su primo el rey de representado el monte Calvario y á Je
Portugal. Mostraba deseos de saber en sucristo crucificado, y á un lado dél al
qué punto de la tierra se hallaba, y ro rey don Sebastian, y al otro á su exce
gaba á Fr. Miguel que procurase ave lencia vestidos de blanco y las coronas ,
riguarlo; redoblando para que el Señor puestas en el suelo y cada uno con una
la iluminase sobre aquel asunto sus
ayunos y sus oraciones. (1) Archivo general de Simancas . Negocia
Fr. Miguel con la mayor habilidad do de Estudo, Legajo 172,

26 CAUSAS CELEBRES,

bandera en la mano, y que admirado haberle llegado á la sazon nueva que


de ver aquello suplicó á Nuestro Señor S. M. le quiere hacer merced de algun
en el memento de la misa que le decla obispado, el dicho fray Miguel habia
rase lo que era, y dice que le dijo Dios suplicado entonces á Nuestro Señor
que él habia guardado aquellos dos que apartase dél tan grande peligro
muertos para manifestarlos al mundo como era ser obispo, v que entonces le
y restaurar por ellos á su Iglesia la Ca habia dicho Nuestro Señor: ¿pues qué,
sa Santa de Jerusalen y destruir la se quieres ser mártir? y el dicho fray
ta de Mahoma, y que para esto los ha Miguel le habia respondido que sí, y
bia de juntar en matrimonio, y que lo por habérsele cumplido por este modo
mismo le dijo Nuestra Señora y San Pe de su prision esto piensa su excelen
dro y San Pablo y San Juan Bautista y cia que el demonio le engañó hacién
otros muchos santos, y que en la mis dole ver otras cosas.
ma misa al tiempo del consumir le di Y demas de esto que tiene dicho
jo Nuestro Señor, que lo que habia oido casi cada dia por espacio de un año
eso era verdad, y que el dicho fray Mi poco menos, decia el dicho fray Mi
guiel se esforzase á servirle y que lo guel á su excelencia que la via á ella
mismo dijese á su excelencia. y al dicho rey don Sebastian, en la
ltem, otro dia mas adelante dijo: misa ó en la oracion y con ellos los
que estando en su celda en oracion se apóstoles San Pedro y San Pablo y
le representó Nuestro Señor como solia otros muchos santos y á Nuestra Se
y juntamente el rey don Sebastian y ñora á quien él los encomendaba, que
su excelencia asidos de las manos ves le decian lo mismo que arriba va de
tidos de color y le dijo las mismas pa clarado.
labras Nuestro Señor, que arriba, que Y últimamente, despues de estar
por aquellos dos tenia determinado de aqui Gabriel de Espinosa le decia el
ganar la Casa Santa y dice que dicien dicho fray Miguel á su excelencia que
do el dicho fray Miguel á Nuestro Se via un dedo de Nuestro Señor sobre la
ñor que no fuese engaño , aquello, le cabeza del dicho Espinosa diciéndole
respondia, que le hablase el mismo rey que aquel era el rey don Sebastian,
don Sebastian él le diria lo que por lo cual y por lo mas que tiene di
era, y dice que le habló el mismo rey cho su excelencia se lo creia por el
le dijo, que Dios por su infinita mise crédito y estimacion que tenia del di
ricordia le habia guardado para acre cho fray Miguel como si se lo dijera
centamiento de su Santa Fé como lo te un ángel, y á este propósito le decia
nia dicho, en compañía de su excelen otras muchas cosas cada dia.
cia á la cual, no habia de querer tanto
en amor cuanto en celo y deseo del Mientras fray Miguel de los Santos
servicio de Dios que para esto los jun iba alucinando con esta clase de reve
taba. laciones á la pobre religiosa, poniendo
Item otro dia adelante dice que vió en juego, para seducir su sencillez, la
á los dichos rey don Sebastian y á su intervencion de Dios y de sus santos
excelencia puestos junto al Sepulcro, apóstoles en el santo sacrificio de la mi
contemplando en Jesucristo sepultado, sa; asegurándole la tenia destinada para
y junto á ellos un ángel que les decia: cosas muy altas, hasta llegar á ser la
veis cómo está aquí Jesucristo muerto, esposa del rey don Sebastian, que se
ues ansí esta el mismo Jesucristo en hallaba vivo y se manifestaría en su
os corazones de aquellos que le blas dia, continuaba visitando con frecuen
feman; levantaos á poner por obra lo cia al pastelero é intimando con él sus
que el Señor tiene ordenado. Y que relaciones.
al mismo punto vió una gran armada Persuadiendo á doña Ana de la
y una galera de ella que tenia en la verdad de sus fingidas revelaciones,
vela un Crucifijo pintado á donde se haciéndola confiar en un lisongero
embarcaron su excelencia V el dicho porvenir, fingiendo cada dia una noti
rey don Sebastian, y el dicho fray cia sobre el paradero de don Sebas
Miguel en otra con muchas personas tian, y prometiendo que muy pronto
eclesiásticas á su cuenta, y que por le veria, logró que aquella buena se
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL. 267
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ñora esperase de tal modo esto que de Austria, á quien habia con tiempo
como ella misma confesó, despues de imbuido y persuadido altamente de
la fé, nada era para ella mas cierto. que vivia el rey, don Sebastian, y á
Al mismo tiempo enteraba al paste quien todos los dias le hacia concebir
lero de la creencia general y la voz la esperanza de que llegaria á verlo, y
ue corria por todo Portugal de que en la que habia escitado ardientes de
¿ Sebastian no habia muerto en la seos de que llegase ese dia en el que
batalla de Alcazarquivir, invitándole á presentándosele, le reconoceria co
que aprovechándose de su admirable mo tal.
semejanza con el rey, entrase en una De comun acuerdo el fraile y el
combinacion política fácil y segura en pastelero comenzaron á disponer su
que nada aventuraba, y en que podia plan. Espinosa se instruia todos , los
ganar hasta un trono. dias en la historia de don Sebastian;
Habia notado fray Miguel en el pas sabia por el fraile, que habia sido su
telero un aire de nobleza, una eleva confesor, todas las anécdotas que de
cion de pensamientos que revelaba en él se contaban, todos los actos y pala
él otro orígen noble, y no el de un bras notables, en fin, todo cuanto era
hombre oscuro y de la humilde condi necesario para poder representar con
cion en que se hallaba. En vano inten propiedad y naturalmente el persona
tó el astuto fraile descubrir el secreto ge del rey.
que ocultaba el pastelero. Jamás, ni á Espinosa era un hombre de talento
pesar de la intimidad que entre ellos claro, de aire noble, magestuoso porte
se habia establecido, ni de la empresa y hablar fácil: aleccionado por fray
árdua y grande á que entrambos se Miguel de los Santos se halló en breve
arrojaron, descubrió Espinosa su se en estado de representar su papel. La
Cret0. primera persona por donde habia de
Mas tarde lo guardó tambien en comenzar su ensayo era por doña Ana
umedio del tormento, y lo llevó consi de Austria.
go al sepulcro. Este hombre misterio Ya hemos visto como el hipócrita
so, sobre cuyo orígen nada ha podido confesor habia ido ¿ diariamen
averiguar la historia, ni descubrir el te preparando el ánimo de esta senci
tiempo, accedió al proyecto concebido lla señora; como valiéndose de fingi
por fray Miguel de los Santos. das revelaciones, habia arrojado en el
Este hombre de gran prestigio y alma de aquella jóven religiosa, vícti
autoridad moral en Portugal, le propuso ma de la política, ¿ COnt, I"a Su
divulgar por medio de sus numerosos voluntad en el claustro, la esperanza
amigos , y muy particularmente por de ser un dia la esposa del rey. Aquel
medio de los frailes, la voz de que vivia deseo que habia hecho nacer el astuto
el rey don Sebastian, y que muy pron fraile en el corazon de la sencilla vír
to se presentaria en medio de sus gen, alimentado por la soledad, habia
vasallos. Se dedicó escribir á varias crecido, era su ocupacion de todos los
personas principales de aquel reino dias, de todos los instantes. Estaba,
para que, ó viniesen, ó enviasen per pues doña Ana de Austria perfecta
sonas de su confianza á ver y reco mente preparada para la entrevista
uocer al rey don Sebastian, seguro que iba á proporcionarla su confesor
de que ellos se equivocarian al ver con el fingido rey don Sebastian.
al pastelero, cual él se habia equi Al preguntar un dia, como todos
vocado, y que entonces, corroborada ellos doña Ana de Austria á frav Mi
la noticia con los testigos de vista, guel si habia tenido noticias del rey,
seria inconcuso indudable lo que hacia le manifestó éste que las habia tenido,
# años era una opinion profun y tan buenas, que acababa de separar
amente arraigada en el pueblo, opi se de él, que el rey tenia grandísimos
nion que halagaba el amor á la inde deseos de hablarla, aunque no se ha
pendencia, y robustecia el odio á la bia resuelto á descubrirse.
dominacion española. Difícil es pintar la emocion con que
Hizo ver al pastelero que tendria escuchó doña Ana que el rey don Se
un auxiliar muy poderoso en doña Ana bastian se hallaba en Madrigal; du
$
268 CAUSAS CELEBRES,
- =

daba la realidad de lo que hacia tanto des negocios en que se hallaba empe
tiempo era el deseo mas vehemente ñado. Advirtió al mismo tiempo á doña
de su corazon. Ana que le hacia aquella confianza sin
Fray Miguel le manifestó que hacia que el rey supiese nada, por lo que
cuatro meses qne se hallaba oculto en cuando viniese á verla procuraria di
Madrigal bajo un trage y condicion simular presentándose y hablando, no
humilde; pero que le habia prohibido como quien era, sino como un humilde
espresamente no hablase á nadie de menestral que aparentaba ser, y en
ello hasta que se lo permitiese la si cuya condicion queria permanecer
tuacion de sus asuntos. hasta que el estado de sus negocios le
Grande fué el sentimiento que mos permitiese presentarse á los ojos del
tró doña Ana en no poder ir á ver á mundo cual correspondia á su dig
don Sebastian. Aquel claustro en que nidad.
contra su voluntad habia entrado, y Doña Ana quedó muy contenta li
en que se veia detenida, jamás le pa sonjeándose de que cuando su primo
reció mas insoportable, hubiera que don Sebastian se hallase en su presen
rido volar al encuentro de aquel rey, cia, ella sabria inspirarle tal confianza,
de aquel primo suyo que por tantos que el mismo se le descubriria.
meses habia sido el asunto de sus con Gozoso fray Miguel al ver que en
versaciones, el objeto de sus pensa el crédulo ánimo de doña Ana no ha
mientos. bia producido duda y vacilacion algu
Rogó á fray Miguel con insistencia na ni el trage ni la humilde condicion
le ofreciera sus respetos y le suplica bajo la cual habia de presentarle á su
se viniese á verla. Complacíase el dies primo el rey don Sebastian, marchó á
tro confesor en ver el ardor con que ponerse de acuerdo con el pastelero
solicitaba su augusta penitente una Gabriel, y á concertar como al dia si
entrevista que él tan hábilmente ha guiente habian de ir á visitar á do
bia preparado, y que debia ser la pri ña Ana.
mera escena del atrevido drama que Prevenida esta, aguardaba impa
halia concebido su travesura é iba á ciente la visita en el locutorio del
representarse á los ojos de la Europa, convento, visita que habia de verifi
y cuyo desenlace debia ser un cadalso carse sin mas testigos que fray Mi
ó un trono. guel.
Manifestó entonces á doña Ana, Entró éste con Gabriel de Espi
con no poca alegría de esta, que él, nosa en su trage comun, mostrando
previendo sus deseos, se habia adelan un desaliño y aire vulgar afectado, y
tado á inclinar al rey don Sebastian á poniéndose de rodillas con la cabeza
que fuese á visitarla; pero que hallaba descubierta, preguntó á doña Ana qué
un gran obstáculo en el rigoroso in tenia que ordenarle su excelencia.
cógnito que tenia que guardar, y el Mandóle levantarse doña Ana, y
humilde trage que vestia para hacer escusándose él con lo bajo de su con
creible la condicion humilde conque se dicion, y que de aquel modo debia ha
ocultaba. blar a una persona tan alta; afectó sin
Entonces contó fray Miguel como embargo obedecer, y al contestar ca
se habia presentado el rey don Sebas si sin levantar los ojos á la pregun
tian con el disfraz de pastelero, esta ta de doña Ana, por su nombre, y al
bleciendo una tienda de estos géneros, decirla que se llamaba Gabriel de Es
trabajando algunas veces para disimu pinosa y que era pastelero, vió que la
lar, y no llamar la atencion de las monja no pudo contener la risa, y que
gentes. le dijo que estaban descubiertos sus
Con lágrimas en los ojos escucha pasteles, que era sabedora de todo,
ba doña Ana á su confesor. Insis que era escusado el fingimiento, que
tió en su ruego, y el fraile le prometió debia ocupar el sitio que le correspon
trabajar con el rey para que viniese dia por su noble sangre, quejándose
lo mas pronto que le fuese posible á de que esta no le hubiese, estando
visitarla, encareciendo el poquísimo tanto tiempo en Madrigal, impulsado á
tiempo que le dejaban libre los gran- que fuese á ver á su prima, y confiá
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL. 269
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dose á ella antes que á cualquiera otra Satisfechos, aunque por diversos
persona por íntima que fuese. intereses, quedaron los tres interlocu
Con noble magestad se cubrió en-tores de esta conferencia. Fray Miguel,
tonces Espinosa, tomó asiento, y tras- porque habia hallado el hombre que
formado de repente del hombre vulgar para sus proyectos necesitaba, y que
que momentos antes representaba, en admirablemente representaba el papel
un personage de la mas noble apostu- del rey: el paatelero, porque en un
ra é importancia, continuó la conver-mal paso se aseguraba la poderosa in
sacion sobre otro tono, y tratando á fluencia de una sobrina de Felipe II
doña Ana como á su prima, procuró que se asociaba tan cándidamente á
satisfacer sus motivos de queja con la su empresa: y doña Ana, porque le
necesidad de ocultarse para no reve- encantaba la idea de poder ser útil á
lar hasta su debido tiempo su existen- su primo, en que su imaginacion veia
cia, y por el temor de que despues de en lontananza un esposo y la libertad
haberla visto y comunicado sus penas, saliendo del claustro.
las circunstancias le hubiesen hecho Doña Ana, aunque habia hecho sus
separarse tal vez de ella para volver votos monásticos, gozaba como persona
á esponerse a los azares de una larga real ciertas prerogativas y preeminen
peregrinacion por tierras estrañas y cias, poseia bastantes bienes, y tenia
dilatados mares, en cuyo caso hubiera por órden del rey el tratamiento de
sido mas terrible su pesar. escelencia, único tratamiento que ha
Arrasados los ojos de lágrimas le bia tenido su padre don Juan de Aus
oia doña Ana. Manifestóle, que termi-tria, á quien siempre negó Felipe II el
nada ya la ficcion, queria ayudarle con de Alteza que todo el mundo le daba.
toda su alma y con todos los recursos Tenia doña Ana destinadas para su
en el negocio que tanto le interesaba. servicio dos monjas de familias nobles
Esperaba que no saldria de Madrigal llamadas doña Luisa de Grado y doña
hasta que, arreglado todo, tuviese que María de Nieto, que eran á la par que
marchar á Portugal. Dolíase del esta- religiosas una especie de camaristas
do de estrechez á que se veia reduci- suyas. Ellas la acompañaban en todo,
do, y exigió que para que sufriese me- y á ellas puso en la confianza de la
nos dejase por su cuenta, su cuidado aparicion del rey don Sebastian, su
y regalo. primo.
Resistió Gabriel de Espinosa, pero La mayor franqueza é intimidad se
insistió doña Ana, y tuvo que ceder al estableció entre doña Ana y Gabriel de
generoso afan de la entusiasmada se- Espinosa, que con el fraile iba todas
ñora. Esta le habló largamente de sus las mañanas al convento. Muchos dias
vicisitudes. El pastelero, perfectamen-comian alli los tres, y eran servidos
te instruido por fray Miguel, contestó por las dos monjas, sin que las demas
á todo con tal precision, tal facilidad se opusiesen á aquella manifiesta in
y soltura como hubiera podido haberlo fraccion de las reglas, porque fray Mi
hecho el verdadero don Sebastian so-guel era el vicario, y arreglaba todo á
bre los actos mas íntimos de su vida. medida de sus deseos.
Qué mucho que doña Ana ya preo- El infatigable fraile, por medio de
cupada hacia meses con la venida de grandes rodeos dirigiendo primero sus
don Sebastian, se dejase fascinar con cartas á fray Alvaro de Jesus, procu
las palabras de tan hábil actor! rador de la órden de San Agustin, en
Llegó el momento de separarse. Do- Lisboa, que éste entregaba á un mer
ña Ana se despidió con el mayor sen-cader de aquella capital llamado Ma
timiento de su primo, arrancando de nuel de Tabares, escribia á don An
éste la promesa de que todos los dias, tonio, prior de Crato, que se hallaba
durante su permanencia en Madrigal, refugiado despues de sus frustradas
iria á verla al convento y aun que co-tentativas en París, viviendo de una
meria en él, para poder tener el gusto pension que le daba la generosa com
de recibir los obsequios de su prima y pasion de Enrique IV.
ocuparse en el gran proyecto de reco- En aquellas cartas le llamaba con
brar su trono de Portugal. instancia para que viniese disfrazado
270 CAUSAS CELEBRES.
==

á Madrigal ó enviase una persona con Acordado todo entre don Antonio
quien pudiese entenderse y hacer y fray Miguel de los Santos, hizo este
le ver lo adelantado que llevaba sus que sus compañeros se saliesen de la
a SuntOS. villa, y al amanecer entrasen dirigién-.
En efecto, el dia 21 de agosto de dose desde luego á la casa del pas
1594, estando fray Miguel de los San telero.
tos tomando el fresco paseándose fuera Este los recibió al pronto cual si
de la puerta del convento, sintió que fuesen viageros que venian alli á ha
se llegaba á él un hombre, el cuál, to cer su comida, y mandó al ama que les
cándole ligeramente en el hombro, dispusiese algunas aves y pasteles.
le dijo: Habiéndole indicado aquellos viageros
-A estas horas se saltean los ami que deseaban hablarle sin testigos, hi
gos. zo Espinosa que entrasen en una pieza
Volvióse, y se encontró lleno de interior.
asombro con el mismo don Antonio, Apenas se hallaron en esta, cuan
prior de Crato, el que habia llegado do todos tres se postraron en su pre
aquella misma tarde al pueblo acom sencia doblando la rodilla y besan
pañado de otros tres caballeros por do respetuosamente su mano, tratán
tugueses, á quienes habia dejado en dole como á su º y manifestándole
el meson. la estrañeza que les causaba el verle
Abrazáronse tierna y afectuosa en aquel trage y humilde condicion.
mente cual dos amigos que hacia lar Gabriel de Espinosa con noble ma
go tiempo no se habian visto, y co gestad los hizo levantar; los mandó
menzaron á hablar del gran negocio tomar asiento, y les preguntó que quie
que traia entre manos, comunicándo nes eran. Entonces ellos le manifesta
le detenidamente todo su plan, y los ron que, habiendo llegado á oidos de
medios con que contaba para llevarlo algunos señores de los mas principa
adelante fray Miguel, el cual dispuso les de Portugal que se hallaba vivo, y
ue don Antonio, sin presentarse, pu permanecia oculto y desconocido en
¿ ver muy á su sabor á Gabriel de aquella villa, á pesar de las grandes
Espinosa. diligencias que para sofocar aquella
Don Antonio quedó sorprendido de noticia habia tomado el gobierno espa
la semejanza que tenia aquel pastele ñol, habiendo recibido estas noticias
ro con el difunto rey don Sebastian, de persona de cuya fé no podian du
semejanza, que á pesar de cuanto le dar, habian venido ellos en nombre
habia dicho su amigo, fray Miguel de de la nobleza del reino para cerciorar
los Santos, no acababa de creer. se por sus propios ojos, y en caso
Acordaron entonces que los tres de ser cierta aquella noticia tan grata
compañeros que habian venido con él al pueblo portugués, ofrecerle sus vi
á Madrigal desde París, dando un lar das y sus haciendas.
go rodeo por Inglaterra y desembar Gabriel de Espinosa, cual si toda
cando en Portugal, de donde de casa la vida hubiera ocupado un trono, re
en casa de sus parciales habian podido cibió aquellas señales de respeto y de
hacer con toda seguridad el camino, aprecio con la mayor serenidad, pre
se avistasen con Gabriel de Espinosa, guntándoles si el pueblo portugués
para ver si en ellos producia igual le recibiria con gusto, y enterándose
efecto la asombrosa semejanza que te detenidamente de los medios con que
nia con el rey, y con el objeto tam se podria contar para poder llevar ade
bien de confirmar á Espinosa cada vez lante aquella empresa.
mas en la empresa en que se habia Hiciéronle ver los comisionados que
comprometido, la que se preparaba, no el pueblo conservaba viva su memoria,
precisamente para aquellos momentos, y la esperanza de volverle á ver algun
sino para cuando se verificase la muer dia, sufriendo cada vez con mayor dis
te del ¿ Felipe II, á quien contínuos gusto la dominacion castellana, asegu
repetidos ataques de la gota indica rándole que en el mismo momento en
an que no debia prolongarse mucho que adquiriese la certidumbre de que
Su existencia. se hallaba vivo, y le viese presentarse
EL FINGID0 REY DEPORTUGAL, 271

en las fronteras de su reino, todos acu- contestó á fray Miguel que veia lo
dirian á colocarse á su lado y restaurar bueno que iban saliendo sus planes. El
le en el trono. Ofreció Espinosa consa vicario , todavía queria comprometer
rar los dias que le restaban de vida en mas en la empresa comenzada al paste
¿ feliz al pueblo portugués, pero les lero y á doña Ana de Austria.
encargó la reserva y actividad en pre Para esto, un dia le preguntó á Ga
parar los medios para el momento opor briel de Espinosa qué juicio habia for
tuno, asegurándoles que despues de mado de aquella señora. Contestóle
la larga peregrinacion á que se habia éste que le parecia una jóven gracio
condenado en espiacion de la desgracia sa, bella, y candorosa como un ángel.
da batalla de Alcazarquivir, si desea Afirmó el vicario que le parecia dig
ba volver al trono, era por ocuparse en na de una corona, y que en caso ie
la felicidad de sus vasallos. triunfar como creia, y de ceñir en sus
Con lágrimas de ternura escucharon sienes la corona de Portugal, era la es
los caballeros portugueses las palabras posa que debia llamar á compartir con
de aquel que creian ser su rey, ó al me él el trono.
nos el que tenian un interés en que to A las objeciones que por su estado
do el mundo lo creyese. Quisieron pos de religiosa le hacia el pastelero, di
trarse nuevamente á sus pies, pero lo ciéndole que los votos religiosos impo
impidió Gabriel de Espinosa, el cual, sibilitarian siempre esta parte de sus
al despedirlos, quiso hacerles algu deseos, contestó el intrigante vicario
nos regalos de aves, asados, y otras manifestándole con ejemplos repetidos
cosas propias del oficio que ejercia. de la historia que los votos religiosos se
Aquellos caballeros no quisieron acep habian dispensado á las personas rea
tarlo, lisonjeándose con las muchas les para ocupar el trono y asegurar la
mercedes que podrian obtener de su sucesion de los reinos: que esto mismo
futuro reinado. habia estado á punto de suceder con el
Salieron los comisionados con la po último rey de Portugal, el cardenal
sible reserva de Madrigal, y á cierta don Enrique, que habria obtenido la
distancia, fué á reunirse con ellos el dispensa matrimonial á no haberse
prior de Crato, quedando todos muy opuesto como hemos visto todo el peso
satisfechos de aquel gran medio que se y autoridad del rey Felipe II; propu
les proporcionaba para llevar adelante so que él se encargaria, cuando llegase
su propósito. este caso, de que el papa enviase las
Gabriel de Espinosa, aunque se habia bulas de la dispensa. Mucho lisonjeaba
lanzado desde un principio á represen á Gabriel de Espinosa esta nueva faz
tar el papel del rey don Sebastian, que que á su proyecto queria dar el vicario,
dó mas contento y satisfecho al ver que empero no pudo menos de manifestarle
los mismos caballeros que venian de que á pesar de lo grato que esto le se
Portugal incurrian en el mismo error en ria, creia que jamás doña Ana corres
ue le habia persuadido fray Miguel ponderia á su amor, porque su concien
e los Santos caerían todos cuantos le cia pura no le permitiria obrar contra
viesen. su voto solemne.
Caminaba, pues, viento en popa Entonces el astuto religioso, que no
la representacion de este drama, que solamente era un conspirador, sino que
hoy pareceria increible á no estar apo para auxiliar la conspiracion no titu
yado en tan incontestables documen beaba en constituirse en tercero, cosa
tOS. tan repugnante á su carácter sacerdo
Al volverá hacer su visita diaria al ta, le hizo notar el afecto y el interés
convento mas tarde de lo que acostum con que doña Ana le miraba. Al decir
braba el fingido rey con el vicario, doña Espinosa que aquel afecto y aquel in
Ana, que lo esperaba con impaciencia, terés, dimanaban en aquella señora de
se quejó de su tardanza. Gabriel de la creencia en que estaba de ser su
Espinosa le refirió cuanto , acababa de primo hermano, contestó fray Miguel
ocurrirle con los comisionados que manifestándole que de ese interés del
habian venido de Portugal, lo que parentesco de primo al amor no habia
causó no poca emocion á doña Ana, y mas que un punto imperceptible; y
272 CAUSAS CELEBRES.
-

que para acallar los escrúpulos que po destinaba Dios en el mundo al rey don
dria tener su conciencia por el voto, él Sebastian, obra á que se habia dedica
quedaba encargado de aplacárselos per, do ya en el Africa, y que si bien alli
suadiéndola de que tal era la voluntad habia sido desgraciada por los altos
de Dios, la del pontífice romano, y la juicios de Dios estaba destinada á con
suya; y que como conocedor de su ca sumarse en lo sucesivo.
rácter é inclinaciones, veia esta parte Vacilaba la pobre señora en su con
de su proyecto sumamente fácil y ha ciencia, con los deseos de su corazon, y
cedera. la impresion de una declaracion hecha
Gabriel de Espinosa recibia con por medio de su confesor, pero le mani
gusto estas indicaciones, pero no creia festó que aun cuando todo pudiese ser
que hubiese medio de empezar la con como le aseguraba, creia que no se de--
uista del corazon de doña Ana antes cidiria á ello.
e hallarse en el trono de Portugal, insistió en persuadirla fray Miguel, y
reputando una temeridad el hacer en obtener su decision manifestándola
le la menor indicacion. Fray Miguel de clara y terminantemente que le hacia
los Santos tomó á su cargo todo este aquella declaracion por órden espresa
negocio, encargándose de esplorar su y terminante del rey su primo, que se
corazon, y una vez abierto el camino hallaba prendado de sus gracias y de
dejar que lo anduviese por, entero el sus virtudes, y que habia concebido
pastelero, á quien para esto le propor- por ella desde el momento mismo en que
cionaria todas las ocasiones posibles, la vió a pasion mas vehemente, y que de
Aqui ya fray Miguel de los Santos todas las princesas de la cristiandad ella
se constituye en un tercero de amores, sola era la que queria que compartiese
valido de la intimidad con que siem- su corona y su trono. La repitió que
pre le recibia doña Ana, y mas que to- aquella 0"a la voluntad de Dios, y que
do, abusando del prestigio que sobre no debia, resistiendo al amor de su pri
su corazon ejercia al hablarle como un mo, agravar los grandes disgustos que
hombre inspirado de Dios, de quien le le atormentaban..
comunicaba mentidas revelaciones, se Doña Ana, cediendo á la dulce vio
dirigió á doña Ana, y sin andarse en lencia de estas razones, y protestando
rodeos comenzó por preguntarla, si que su ánimo era el de vivir tranquila
acompañaria con gusto á Espinosa en el monasterio, manifestó que hacia
cuando fuese á sentarse en el trono. lo que le aconsejaba, cargando él con la
Contestó aquella sencilla señora, que rcsponsabilidad, y obteniendo la licen
con el mayor entusiasmo veria su en cia del sumo pontífice. Poco escrúpulo
trada en su capital, rodeado de sus va era esto para fray Miguel, que tomó so
sallos, empero que aquello no podia ser. bre su conciencia la responsabilidad de
Manifestóle entonces fray Miguel, aquel acto, ofreciendo aumentar sus
que tal vez para entonces podrian ha oraciones y ayunos para que el Señor le
ber cesado todos los inconvenientes. No iluminase, y escribir al papa.
alcanzando aquella buena señora como Con esta nueva intriga del confesor
acabó de trastornarse la cabeza de la
podian cesar para entonces estos incon
venientes, porque la clausura siem pobre doña Ana de Austria, entregando
pre seria para ella la misma hallándose su corazon al fingido rey, de quien creia
ligada con votos eternos, pronunciados ser un dia la esposa, y lo que antes ha
al pie de los altares, fray Miguel le es bian sido visitas de primos, fueron en
plicó que habia motivos a veces muy lo sucesivo visitas de amantes, estable
poderosos por los que la misma Iglesia ciéndose entre don Gabriel y doña Ana
y su pontífice, en quien reside la po una amorosa correspondencia.
testad para dispensar en todo, relajaba Creció en el pecho de la hasta en
los votos religiosos, y que ningun mo tonces timida y casta religiosa el amor
tivo era mas importante y grave, que con la actividad, el ardor y el ímpetu
el que podia tener por fundamento la que reconocerán nuestros lectores en
felicidad de todo un reino y la propaga las cartas de esta señora que originales
cion del cristianismo, que era la gran existen en la causa, y que despues
de obra á que segun sus revelaciones transcribiremos.
EL FINGIDO, REY DE PORTUGAL, 273
-
====

Desde entonces Gabriel de Espino que al fin cedió. Vino á Madrigal, don
sa fué todo para ella, era su dios, su vi de fué perfectamente acogido por el
da, su única esperanza. Gabriel por su vicario, quedando éste en presentarle
parte no omitia nada de cuanto pudie inmediatamente á doña Ana de Aus
se acrecentar su pasion. tria.
Celosa como todas las mugeres que Habia dispuesto las cosas fray Mi
aman, le llamó la atencion la linda niña guel de los Santos de modo que cuan
que Espinosa tenia en su casa, y le do estuviese hablando el médico con
preguntó si era su hija, y si era acaso doña Ana se presentase como de ordi
su madre la muger que con él estaba. nario Gabriel de Espinosa para que
Gabriel sabia bien que la confesion de viese doña Ana el efecto que producia
la verdadera madre de la niña podia su presencia en el desprevenido mé
serle fatal, y asi refirió á doña Ana dico. -

que aquella niña que llevaba en su ros Comenzó doña Ana con el médico
tro marcado el orígen de donde descen Mendez la conversacion sobre el mis
dia, teniendo el verdadero tipo de la fa terioso enfermo á quien habia cura
milia real portuguesa, era hija suya, ha do en Guimaranes, preguntándole si
bida en una noble señora de Oporto, á le conoceria en caso de verle. El mé
quien en la vida errante y azarosa que dico la contestó que siempre lo ha
hacia, habia tenido que abandonar, tra bia visto con el rostro cubierto, y que
éndose á pesar y disgusto de la madre, no le seria posible conocerlo. A la in
a niña que habia confiado á los cuidados sistencia de doña Ana de si no podria
de Clara, que era la muger que le servia conocerlo por la estatura, la configu
de ama. Mostró deseos de que se la lleva racion, ó alguna otra señal, siempre
se al convento, porque cuanto pertene contestó Mendez que poca idea habia .
cia á Gabriel le interesaba como cosa podido formar de un hombre á quien
ropia. Allí la niña era mimada y feste siempre habia visto tendido en la ca
ada á porfía por doña Ana, que queria ma, y mucho menos si no llegaba á ver
a tratase como madre. La niña era ade le la cicatriz de la herida que le habia
más encantadora, lindísima, y con to curado.
das las gracias infantiles de un ángel de A las preguntas capciosas de si ha
tres años! bia conocido al rey don Sebastian an
Nada omitian fray Miguel de los tes de su jornada de Africa, contestó,
Santos y Gabriel de Espinosa para au aunque muy sobre sí, y con la mayor
mentar el amor en que ardia la ena alarma y recelo, que lo habia visto
morada doña Ana. Cada dia se hallaba muchas veces y que conservaba bien
mas condescendiente y persuasivo pa presente su fisonomía.
ra estos amores el confesor, y mas En esto de la conversacion se ha
rendido y galan el pastelero. llaban, cuando entró Gabriel de Espi
Quiso fray Miguel hacer que doña nosa que con gran magestad y aire
Ana se persuadiese por sí misma de noble se sentó; habló de cosas insigni
lo que sus insinuaciones la tenian har ficantes con el médico, haciéndole al
to convencida. Para esto escribió al gunas preguntas sobre su pais, y des
licenciado Mendez Pacheco que se ha pues se retiró segun habia convenido
llaba establecido muy ventajosamente con fray Miguel.
en Portugal, instándole para que vi Apenas habia salido Espinosa, pre
niese á vivir en Madrigal, donde le guntó fray Miguel á Mendez si no habia
prometia mayores ventajas que las reconocido á aquel hombre que acaba
que obtenia en aquel reino, y, ofre la de salir. Contestó no haberle visto
ciéndole sobre todo hacerle médico de jamás en su vida, aunque por el tono
doña Ana de Austria, con cuya pro y los modales finos que usaba en con
teccion é influjo debia hacer gran tradiccion con su humilde trage supo
Suerte. nia que fuese alguna persona de con
Algo tardó en resolverse á ceder á sideracion.
las insinuaciones de fray Miguel de A la pregunta que le hizo doña
los Santos el médico; empero fueron Ana, de si aquel hombre no tenia al
tales sus insinuaciones y sus promesas guna semejanza con el enfermo que
35
CAUSAS CELEBRES.
=es

habia curado en Guimaranes, contestó portuguesa á Madrigal, y todos cuantos


siempre receloso que no le habia visto veian á Gabriel de Espinosa recono
mas que en la cama, pero que le pare cian sin titubear en él al difunto rey
cia que este era hombre de mas edad don Sebastian. Volvíanse estos conten
mas flaco. tos y gozosos de haber besado la mano
A esto repuso fray Miguel que em á su rey, y aseguraban su existencia
pezaba á impacientarse viendo la sola como testigos oculares, aumentando asi
pa y reserva con que procedia el mé partidarios y comprometiendo á otros
dicó, que eso podria ser efecto de que en esta grave conspiracion.
hacia nueve años que habia curado á Empezó, pues, á llamar la atencion
aquel ¿¿ de los trabajos que los muchos portugueses que con este
habria pasado desde entonces; y di motivo venian á Madrigal, hablaban
rigiéndole directamente la pregunta ya de ello los vecinos, y comenzaban
de que puesto que habia, conocido al á fijar la atencion en aquel pastelero,
rey don Sebastian antes de su espedi de quien ademas murmuraban porque
cion á Africa dijese si aquel hombre se habia empezado á transpirar la gran
no tenia un gran parecido con aquel de intimidad y trato que tenia con do
rey: contestó el médico cada vez mas ña Ana de Austria.
alarmado, y recordando los trabajos y Hablaban de las grandes conside
penas que le habia ocasionado en otro raciones, los regalos que le hacian y
tiempo el haber cometido una impru las largas visitas de muchas horas que
dencia en este asunto, de que no en pasaba el pastelero en el convento. De
contraba la menor semejanza entre las apariencias empezaron á deducir
aquel hombre y el rey don Sebas cosas sumamente graves y poco decoro
tian. sas á la buena fama y opinion de do
Por mas que intentó fray Miguel ña Ana.
con palabras dulces y benévolas hacerle Esta, mas enamorada que nunca,
confesar aquella semejanza, diciéndo habia caido en el lazo que á su ines
le que el rey don Felipe II se alegraria periencia habia tendido fray Miguel
muchísimo de saber la existencia de de los Santos. Este habia llegado á fa
su querido sobrino, y premiaria al que natizar de tal modo con sus persua
le descubriese tan agradable noticia, siones aquel corazon sencillo y apa
no pudo el astuto fraile hacerle con sionado, que aquella noble y virtuosa
testar ni una palabra afirmativa. señora habia condescendido en que la
Doña Ana, á quien incomodaba desposase con el pastelero.
aquella negativa, trató con sequedad al Habia recibido de Gabriel de Espi
médico, y con cierto enfado y desden le nosa una cédula en forma en que le
mandó retirar de su presencia, dicién prometia su mano; cédula redactada
dole que era tal la vanidad de los por en los términos mismos de cancillería
tugueses y su hinchazon que no que que suelen usar los reyes, y en que
rian reconocer á su rey porque le veian llamándose él don Sebastian, rey de
en aquel estado tan triste y abatido. Portugal, firmaba: Yo el rey. Con este
Salióse el médico del monasterio aparente desposorio la enamorada doña
alarmado y receloso, y pensando mar Ana se abandonó mas y mas á su pa
charse pronto de Madrigal, temien sion V al amor en que ardia su corazon
do le sobreviniese alguna nueva des por el falso don Sebastian.
gracia. No parecia sino que la sombra Habian llegado las cosas á tal pun
el rey don Sebastian salia de su se to, era tanto lo que se hablaba en el
pulcro para perseguirle y mezclarse pueblo, y tan inminente el riesgo de
para su mal en todas las acciones de que pudiese llamar la atencion de una
su vida. - córte tan suspicaz como la de Felipe lI,
Habia salido mal esta tentativa de que creyó conveniente fray Miguel de
fray Miguel de los Santos, esta prueba los Santos el acelerar el desenlace de
que habia querido presentar, viva y sus planes. Eran estos, que Gabriel de
palpitante á doña Ana de Austria; Espinosa, reuniéndose con algunos
pero á cambio de esto todos los , dias parciales portugueses y españoles que
venian señores de la mas alta nobleza debian esperarle en Burgos, pasase
EL FINGIDO, REY DE PORTUGAL. 275
e- - --º

desde alli ó bien al Portugal, ó bien á peregrino y oculto tantas tierras, aho
Francia. Alli dispondria, bajo el pre ra le sacaria salvo y libre de todo ries
testo de una romería al Santísimo go en un viage tan corto.
Cristo de Burgos, el ir doña Ana de Entonces insinuándole su proyecto
Austria acompañada de él, y desde alli le dijo á doña Ana que él se habia ade
seguir á Gabriel de Espinosa á Francia lantado á prometer por ella una devo
comenzar la grande empresa de ta romería al Cristo milagroso que se
a reconquista de Portugal. venera en la catedral de Burgos, para
No era fácil empresa el reducir á la lo cual habia ya pedido las competen
enamorada doña Ana á que consintie tes licencias á sus superiores, contando
se en la marcha que ya se habia he con que ella ratificaria aquella oferta,
cho indispensable del pastelero. redoblando entretanto uno y otro sus
Para esto fray Miguel de los Santos penitencias y oraciones. Desde luego
se presentó, y la hizo ver que era accedió doña Ana, y ratificó con la ma
indispensable por unos dias la ausen yor sencillez la promesa de la romería
cia del rey de Madrigal. A las razones al Cristo de Burgos que en su nombre
de alarma y de temor que le opuso la habia hecho su confesor. Estaba, pues,
afligida doña Ana, le hizo presente el perfectamente urdida la trama.
vicario que era una cosa precisa, por Llegó el momento de despedirse de
ue no podia fiar á nadie lo que debia doña Ana Gabriel de Espinosa. Fué,
¿ tratar en aquellos dias en Vallado pues, este un acto desgarrador pa
lid y en Burgos, pero que muy pronto ra la pobre señora, y Espinosa afec
estaria de vuelta, porque él conocia lo taba de tal manera la emocion y la ter
intolerable que se hacia la ausencia en nura, que engañó completamente á la
almas enamoradas. Le manifestó como enamorada monja.
en Burgos habia muchas personas que Era preciso separarse. Exigió doña
le aguardaban, y estaban decididas Ana, sin embargo, que aun antes de
para en su dia levantar la voz y colo marchar, volviese al dia siguiente su
carle en el trono, y aun le hizo enten fingido primo para despedirse, y se pu
der, porque la buena de doña Ana era so ella misma á prevenir todo lo nece
muy fácil de persuadir, que entre sario para el viage.
aquellas personas veria á un hermano Cuando al dia siguiente fué por la
suyo, un hijo natural de don Juan de noche para despedirse, la halló en un
Austria llamado Benamar á quien ella triste estado de congoja y de pesar.
no habia conocido, y cuya existencia Doña Ana habia reunido el dinero que
aun ignoraba, y que tendria el mayor habia podido y diversas y ricas al
placer en dárselo á reconocer. hajas; cuando se presentó Espinosa,
A las repetidas preguntas que le despues de haberle abrazado tierna
hizo doña Ana de que si aquella ausen mente le rogó que las aceptase co
cia era efecto de que marchaban mal mo una memoria suya, autorizán
los asuntos de su primo el rey de Por dole para venderlas si de ellas te
tugal contestaba tranquilizándola fray nia necesidad. Negóse con el mayor
Miguel, diciéndola que jamás habian desintéres y nobleza el pastelero á re
marchado mejor. Espresaba doña Ana cibir aquellas alhajas: nada pudieron
que un terrible presentimiento oprimia con él las exigencias de doña Ana; em
su corazon á la idea de separarse de pero mediando fray Miguel de los San
aquella persona con quien se hallaba tos, las tomó éste, ofreciendo á doña
unida por tan estrechos y sagrados vín Ana que él las meteria en el equipage
culos que no tardarian en ser indisolu del rey.
bles. En efecto, colocó fray Miguel en la
Fray Miguel de los Santos le hacia maleta del pastelero de Madrigal un
presente que aquello era efecto de la vaso de unicornio guarnecido de oro y
esquisita sensibilidad de su corazon, y de preciosa pedrería; un libro misal
que Dios, que por espacio de nueve con tapas de oro finísimo, preciosamen
años habia preservado al rey don Se te cincelado, regalo que la reina de Es
bastian de tantas pruebas y peligros paña habia hecho á su sobrina; un ri
cuando surcaba los mares, y recorria quísimo anillo de oro con una gran pie
276 CAUSAS CELEBRES.

dra preciosa en la que estaba esculpi niñez en el claustro. Nosotros copiare


do el retrato de Felipe II, don del mos estas cartas que existen unidas,
afecto de este poderoso monarca: una originales, en el archivo de Simancas.
piedra bezar grande, engastada de oro: La vida que hacia Gabriel de Espi
un magnífico relój de pecho guarneci nosa en Valladolid era una vida oscura
do de brillantes, y varias imágenes de y misteriosa. Los criados que habia to
santos, con otras cosas de inmenso va mado para su servicio, jamás le acom
lor y poquísimo bulto. Entre estas al pañaban, los citaba con anticipacion en
hajas habia puesto tambien la enamo el sitio ó punto donde los creia necesa
rada monja una trenza de sus rubios y rios, y desde alli los mandaba á su ca
hermosos cabellos. sa, viviendo siempre solo, mudando
En medio de mil sollozos y de mil con frecuencia de habitacion, no veri
suspiros tuvieron casi que desprender ficándose jamás el que dos noches se
la fray Miguel de los Santos y las dos guidas durmiese en una misma posada.
monjas que la asistian, de los brazos Un suceso particular fué la causa
de Gabriel de Espinosa, quedando casi de su perdicion, y del descubrimiento
desmayada, porque el dolor y la aflic de esta atrevida trama.
cion la ahogaban. Gabriel de Espinosa encontró un
Era el mes de setiembre. Al amane dia al anochecer en las calles de Valla
cer del dia 27, muy temprano, empren dolid á una aventurera jóven, hermosa
dió Gabriel de Espinosa su marcha para y agraciada; y aquel hombre que ha
Valladolid vestido con su trage ordina bia tomado sobre sí el representar la
rio, y sin mas compañía que un solo dignidad real, y que tan bien lo ejecu
page de toda la confianza de fray Mi taba, olvidó en un momento el intere
guel de los Santos, y que éste le habia sante papel que se habia propuesto,
buscado. siguió á la hermosa castellana, y en
Salió, pues, de Madrigal en un mal trando en su casa logró trabar amistad
caballo de alquiler; de Madrigal á don con ella. Alli enmedio de las liberta
de no debia de volver sino para termi des propias de esta clase de gentes,
nar ignominiosamente y en una hor fascinado por los encantos de aquella
ca su misteriosa existencia. hermosa prostituta, en un momento de
Llegó Gabriel de Espinosa bastante delirio, debió de mostrarle las ricas jo
molestado del calor, y del mal caballo yas que consigo llevaba.
que llevaba, á Valladolid, donde desde Aquella muger, observando que
un principio debia encontrar adversa no convenian aquellas magníficas al
la fortuna. hajas con el trage humilde del que
Tomó para su servicio dos criados, las llevaba, entró en sospecha de si se
y al dia siguiente uno de ellos le robó rian robadas, y ó bien por codicia de
cincuenta ducados fugándose de su ca adquirir una recompensa descubriendo
sa. Mas que la pérdida de aquel dine aquel robo, ó porque quedase descon
ro sintió el chasco Gabriel de Espino tenta de Gabriel de Espinosa por cual
sa, y lo tuvo por mal ageüro del prin quier motivo, es lo cierto que, presen
cipio de su temeraria espedicion. tándose en casa de un alcalde del crí
Todos los dias iban y venian pro men de aquella chancillería, don Ro
á Madrigal dando cuenta de todas drigo Santillan, le dió parte de que
as circunstancias de su viage, y pro existia en Valladolid un hombre que
curando tener muy al corriente de su habia estado en su casa que llevaba
salud á fray Miguel de los Santos, el ricas alhajas, y que á pesar de que
cual no habia tenido poco que trabajar con ella se habia manifestado , muy
para consolar á la afligida doña Ana de rendido amante, no habia querido de
Austria. Esta, por medio de los propios cirla la posada en que moraba.
le escribia cartas llenas de amor, y Entonces, como hasta el estableci
con unos términos tan enamorados y miento del actual régimen constitucio
fogosos, que parece imposible hu nal, se acostumbraba el que los alcal
bieran salido aquellas espresiones del des de casa y córte de las chancille
alma tímida y sencilla de una señora d los alcaldes de la sala del crí
sin mundo, y encerrada casi desde su men de las audiencias, con sus algua
EL FINGID0 REY DEPORTUGAL. 277
=

ciles, rondasen por las noches para toy en tierra de enemigos, siendo tan á
mantener el órden público, la seguri deshora, puedo temer algun daño. Yo
dad, y perseguir los malhechores. le dije: ¿cómo enemigos? Díjome turba
El alcalde don Rodrigo Santillan do: digo esto porque ayer me robaron
salió á rondar por la noche con objeto
doscientos escudos de oro unos pages
de apoderarse de aquel hombre que le que recibí; y despues he averiguado
habia sido delatado como sospechoso que es verdad que recibió aquellos pa
de un robo. ges y le hicieron un hurto. Pero dícen
Su actividad y vigilancia lograron me que no traia estos pages consigo, ni
dar con él: pero cuando creia haber comian, ni dormian en la posada don
puesto la mano sobre un ladron comun de él estaba, aunque me dicen que el
y vulgar, se encontró con que la habia martes pasado salió al campo y los lle
puesto sobre un célebre conspirador. vaba consigo, y fué á donde estaban
Creemos que la mejor relacion que haciendo mal á unos caballos (1), y que
puede hacerse de su captura es la co habia subido en dos de ellos y héchole
pia original de la carta en que este ma mal con mucha gallardía, y de Suerte
¿? dió cuenta al rey de la prision que se habian espantado los que lo ha
bian visto.
e Gabriel de Espinosa, carta firmada
en Valladolid á 9 de octubre de 1594, Preguntéle cuando le hallé qué ofi
y que literalmente dice asi (1). cio tenia, cómo se llamaba, de dónde
era, y á qué habia venido á este lugar.
Señor: habiendo salido á rondar el Dijo que se llamaba Gabriel de Espino
viernes en la noche, tuve noticia de sa y era pastelero y cocinero de doña
que en este lugar andaba un hombre Ana de Austria, monja de Madrigal, y
en mal hábito y que parecia estrange ue habia venido á este lugar con man
ro, y traia muchas joyas, y entre ellas, . ados suyos. -

una taza de unicornio; y que hablaba Halléle en camisa de holanda muy


palabras sospechosas, porque entre buena y unos calzones de holanda lar
otras le oyeron decir preguntándole gos, y diferente aseo y limpieza de lo
de quien era un retrato que traia en que suelen tener los cocineros.
una sortija en el dedo, dijo es de vues Halléle debajo de la cabecera en
tro amo; y llegándolo á ver y conocer un lencico de holanda envuelto un re
que era retrato de V. M. le habian di loj, unas imagencicas de plata y un re
cho, pues tambien ¿no es vuestro amo? trato de doña Ana de Austria, y la sor
habia respondido: mi amo no, yo lo se tija con el retrato de V. M.
ré suyo y vuestro; y habiendo repara Preguntéle si tenia mas ropa y don
do en esto los que lo oyeron, volvió de , dijo que no tenia mas hacienda
á atravesar razones y á hablar en que un vestido de terciopelo pardo que
otras cosas y á querer dorar y disimu allí estaba, y aquello.
lar lo que habia dicho, y entendí asi Preguntéle nº tenia una tara
mismo otras cosas que me obligaron á de unicornio: dijo que habia traido una
desearle topar, y asi comencé á visitar taza de unicornio para aderezar, y que
los mesones y posadas, aunque era ya la habia enviado á su ama.
muy tarde. Al fin por las señas que de Preguntéle que cuándo la envió y
él me dieron, que es un hombre me dijo que haria tres, ó cuatro dias; y
diano de cuerpo, entre rojo y cano, con como me habian dicho que aquella
un golpe ó nube en un ojo, vine á to tarde se la habian visto, viendo que
par con él en una casa pobre; y hallé mentia y habiéndole oido otras razo
le tan alborotado, que habiendo oido nes que me hicieron el negocio sos—
que estaba alli la justicia, cuando lle pechoso y de consideracion, le hice
gué tenia comenzada á romper una vestir y llevar á la cárcel; entendien
emprenta para huirse. do que por lo menos debia de ser hur
Preguntéle de qué estaba alborota tado lo que traia, y llevándole por el
do, y dijo: alborótome porque como es camino, él me habló de suerte que me
satisfice de que no era ladron, porque
(º Archivo general de Simancas—Nego
ciado de Estado, Legajo 172. (1) Domando.
278 CAUSAS CELEBRES,
-=2

las razones que me dijo eran de hom con cuatro cartas sin sobre escrito que
bre de mas sustancia y mas graves. envio originalmente á V. M. con esta,
Con esto le comencé á amenazar por las cuales, como V. M. lo mandará
¿ me dijese quien era, y que si no
ecia verdad le daria luego tormento.
ver, consta que este hombre se ha fin
gido pastelero y cocinero por encubrir
Dijo que era quien me habia dicho, se y tratar con doña Ana de Austria,
y que qué ocasion tenia yo para ator cuyas son las dos cartas, de letra me
mentarle ni tratarle mal no habiendo nuda aunque parece pone cuidado en
hecho por qué, y que el rey no me te disfrazarla, y las otras dos cartas son
nia aquí para tratar mal á los foraste de fray Miguel de los Santos, vicario
ros sin causa, y esto con palabras muy de las monjas de Madrigal, como cons
Se Vera.S. ta de las dos cartas que van con so
Díjele á esto: ¿pues dónde está el brescritos para mí, porque habiendo
vaso de unicornio, que yo sé que le cogido las primeras para certificarme
habcis tenido, hoy , y á una muger de sus dueños escribí á doña Ana,
á quien disteis á beber en él me lo y en el punto que escribo esta acabo
ha dicho? Y dando un suspiro dijo: de recibirlas por respuesta; y por las
á ella la sanaria el corazon, y á mí me cartas que vinieron para este hombre
ha muerto el alma; vamos á la posada entenderá V. M. que realmente debe
donde le tengo, y llevóme á una casa ser algun personage estrangero por
¿ bien lejos de donde le hallé; y que el vicario le llama de Magestad y
legados á ella, en una arquilla de la le pone por título señor y le firma cria
huéspeda hallamos el vaso de unicor do y otras cosas de reconocimiento que
nio y otro vaso de plata y alguna ropa pertenecen solo á V. M., y parece que
blanca muy buena y un envoltorio doña Ana ha parido de este hombre
grande de cabellos, que lo digo porque que aqui ¿ una niña (1), y es
tiene misterio, como ver á V. M., por te con título de casamiento, y que es
las cartas que van con esta, resolvime hombre que tiene ejército ó compañía
de llevarle preso, aunque ya sin imagi de gente de guerra y hombre de gran
nacion de que fuese ladron, porque él suerte; entiendo que conviene al ser
me dijo que si le molestaba por enten vicio de Dios y de V. M. apretar la ma
der que traia hurtado aquello, que él no en esto y averiguar la verdad, y es
haria por traer recado de doña Ana de to es forzoso para averiguar lo que sea
como todo lo que traia era suyo, y con con mucha brevedad, porque al mo
todo esto le llevé á la cárcel, porque me mento que se entienda que trato de
daba el ánimo que en este hombre ha averiguar mas de si es ladron ó no, po
bia algun misterio; y cierto que si no drán hacer diligencias que ningunas
me hallara atado con la ley que nos basten para ello.
prohibe no se dé tormentos sino fuese Háme parecido dar cuenta de es
dándose , traslado de la culpa y guar to á V. M., para que siendo servido
dando el órden judicial, que aunque me mande despachar V. M. cédula
eran las dos de la noche cuando le lle y comision para averiguar esto, y cas
vé á la cárcel, le diera luego tormento, tigar los culpados, que de todo lo
y pienso que se sacara la verdad; por— que fuere haciendo daré cuenta á V. M.
que el haberle cogido asi de repente y y convendrá ir á Madrigal y á Burgos,
traerle alborotado, echaba yo de ver y en Madrigal coger todos los papeles
que le traia temeroso y confuso, aun que tuviere doña Ana y los que estu
afirmo á V. M. que tiene palabras vieren en poder del fraile, y sacar á sus
e hombre muy grave. criadas de doña Ana y darles tormen
llícele poner en un calabozo á solas to, y al fraile tambien si la necesidad
y donde nadie le viese ni hablase y to
méie todos los pasos de la correspon (1) Por el contesto de las cartas de doña
dencia para tomarle las cartas que le Ana, creyó esto al principio el juez; nuestros
viniesen ó, enviasen, y al dia siguiente lectores conocerán que la equivocacion fué
le cogí un hombre á quien él habia des ocasionada porque doña Ana hacia que le lla
mase madre, á una niña de tres años que te
pachado para Madrigal y venia de vuel nia Gabriel de Espinosa, y que se habidi lleva
ta y traiale algunos regalos y un pliego do al convento doña Ana.
EL FINGlD0 REY DE PORTUGAL, 270
s==

obligare á ello, y hacer diligencia para el alcalde de casa y córte don Rodrigo
coger las personas que tiene en Bur Santillan eran de su pertenencia, y
gos, y de todo como digo, iré dando que Gabriel de Espinosa estaba com
siempre cuenta á V. M. Vuestra Mages petentemente autorizado por ella para
tad lo mandará ver y proveer como poderlas enagenar, rogándole al mismo
mas á su real servicio convenga. Dios tiempo que pusiese en libertad á aquel
guarde la católica persona de V. M., de hombre, que era uno de sus mas fieles
Valladolid, 9 de octubre de 1594.— servidores y criados.
Licenciado, Don Rodrigo de Santillan. Indudablemente el alcalde don Ro
drigo Santillan hubiese puesto en li
A pesar del asombro que al alcalde bertad á Espinosa con esta contesta
habian inspirado las razones que le cion de doña Ana; pero mientras llega
habia dado Espinosa, lo habia puesto ba habia sorprendido las cartas de esta
incomunicado en la cárcel; pero él en señora y de fray Miguel, en las cuales
contró medio para que el alcaide Cris ¿ magistrado habia observado fá
tóbal de Pereda le consintiese mandar cilmente que mas que de una venta
dos correos inmediatamente á Madri de alhajas se hablaba de una gran tra
gal, dando cuenta á fray Miguel de su ma y conspiracion. No podia él pene
prision, y comunicándole sus instruc trar su objeto, pero veia que el asun
ciones. to era de estremada gravedad; y asi es
Esta infidencia del alcaide fué cau que al mismo tiempo que dió el parte,
sa de que, tuviese tiempo fray Miguel que hemos trascrito, al rey, de su
de los Santos para sacar de la casa del captura, le remitió los papeles inter
pastelero un escritorio que habia en ceptados, guardando entretanto cui
ella lleno de papeles, el cual fué lleva dadosamente al preso hasta recibir las
do con mucho sigilo al convento, y de órdenes terminantes de S. M.
cuyo paradero no ha vuelto á saber Estos documentos tan interesantes,
se mas. Fueron sin duda quemados copiados literalmente de los originales
todos los papeles. - que existen en el archivo de Siman
Al mismo tiempo don Rodrigo San cas, inéditos, y que hemos debido con
tillan para comprobar si era verdad lo otros varios á la amistad de don Mo
que le habia dicho el preso, de que desto Lafuente, son la mas exacta y
aquellas alhajas eran de doña Ana de completa comprobacion de cuanto re
Austria, y que por su órden habia ve ferimos de esta causa.
nido á venderlas á Valladolid, mandó
un comisionado para que hiciese esta Carta de fray Miguel de los Santos.
pregunta á aquella señora.
Cuando fray Miguel de los Santos Gran merced es la que V. M. hace
y doña Ana recibieron los dos mensa á esta su casa, en enviar á ella tan
geros, el uno de parte de Gabriel de Es amenudo, aunque si hubiese de ser.
pinosa, y el otro que enviaba el juez, conforme á los deseos de acá, tres
tuvieron el mayor pesar y sentimien mensageros al dia parecieran poco, y
to, porque antes de su llegada, y si V. M. viese los efectos que sus car
cuando ignoraban todavía la prision tas hacen, mucho mas las habria por
de Espinosa, habian enviado cartas bien empleadas, por mas lágrimas que
para éste, en que la monja, sin rebozo sobre ellas se viertan. Ha dado la vida
alguno, le pintaba su amorosa pasion, á mi señora y á los criados de V. M. la
y el fraile le hablaba de varios inci buena nueva que este hombre traio
dentes y circunstancias de la trama de la mejoría de la salud de , V. M.,
que traian entre manos. plegue á Dios sea muy cumplida y por
No se concibe esta falta de precau tan largos años como yo deseo, que á
cion y de cuidado en un hombre que buen seguro se me puede fiar todo en
tan diestro parecia, y á quien todos este caso. El mal que resultó haberle
reputaban por hombre de grande in hecho los caballos no será mas que
genio y talento. cansancio por la descostumbre é in
Inmediatamente contestó doña Ana disposiciones pasadas. V. M. descan
que aquellas alhajas de que le hablaba se, hágase regalar lo mejor que fuere
280 CAUSAS CELEBRES.
-
-

posible, y esté muy bueno y sin enfa mucho. Lo bueno y acordado á mi pa


do ninguno, porque confío en Nuestro recer, seria que vengan en los trages no
Señor, tendrán muy pronto término tan bizarros º sean notados, sino me
los trabajos, y que vendrá lo que el dianamente de manera que puedan pa
Señor suele enviar tras ellos. recer criados de madama, y digan que
El de Madrigal no ha venido, ni vienen con recado suyo y á visitar á
enviado recado ninguno, mas de avi esta señora, y llámese el uno Mazata
sar su dolencia larga y peligrosa. Mire ve, que asi se dice un mayordomo de
V. M. lo que podia haber gastado, y de madama y en llegando aqui me hable á
tan poco cuantía lo que º que mí el uno, que luego daré órden en lo
hoy en Dios amaneciendo, despachó que se ha de hacer; y en cuanto á dor
mi señora un propio para él, envián mir, y posar, si V. M. no gusta en me
dole á mandar, que al punto se venga son, podránse recoger en Blanco-Nuño
y traiga los recados que llevó á cargo, que alli tenemos casa acomodada; y si
à otros que agora se le encargan, y el ama ya no estuviere aqui, podráse
ice mi señora que en viniendo este hacer esto mas llanamante, y si está
enviará luego otro á, V. M. con todos aqui y van á su casa por mas de no
estos recados. La niña está (á Dios che que sea han de ser vistos y el ne
gracias) buena y sana: la gente de ca gocio entendido, y será el peligro muy
sa ya toda es en querer y procurar grande y asi digo, que estará mejor el
regalarla, y andar abobados tras ella, ama con la niña y desde allá la podrá
reconociendo, mal que les pese, que V. M. mandar ir á donde y qomo fuere
hay alli una cosa grande, y con todo servido.
eallan: verdad es que miseñora les ha Este hombre parece hombre de bien
dado tal castigo, que todos han enmu y de confianza, y asi será sin duda que
decido; la gente de fuera tambien ca cogerian allá las cofias y almohadilla
lla por lo menos que yo sepa. El ama que faltaron. La pérdida es poca, sino
está buena y yo la llamé luego; y la fuera por el dueño. Los agnus le envio,
animé, y consolé, y ofrecí todo lo que las alcorzas tambien irán si se encon
pude, que me declarase si habia de trase caja en que quepan, y los treinta
menester algo de dineros, que los bus ducados enviara con mas gusto, quien
caria para ello venderia cuatro libros con tanto envia estas niñerías; y si
que ahí tengo. Dijome que dineros te ellos se pudieran fundir de la sangre
nia por ahora, que no habia, menester de mis venas, yo me la sacara toda sin
sino manteca que no se la querian dejar en ella gota, para servir á quien
vender en la villa, y asi se dió luego ór tan tiernamente amo y con tantas veras
den en ello, y quedó proveida, y tie del alma deseo servir; y no en bien se
ne su criado y hacen su menester, aun ñor mio, que pues con sus ojos vió la
que mi señora desea como la vida ver pobreza de este aposento y de su dueño
acabada esta tienda del todo, y quitada y sabe estas verdades, dejé yo de mara
de aqui de los ojos de las gentes; villarme mucho de que diga V. M. que
y cuanto estarse aqui el ama para si acá hay arrepentimiento de las ni
la venida, parece grande inconvenien ñerías que llevó, que las tornará á
te; porque será imposible poder pasar enviar. Mire, rey mio y señor mio, que
en su casa sin ser reconocidos del pue se lastima mucho la lealtad y amor
blo y será la estampida mayor que la verdadero con esta razon, y crea que
primera, que la gente aunque calla en quien le diera la sangre y la vida, no
esta ausencia, está todavía á la mira le negara la hacienda si la tuviera, y
y con la venida en nueva figura, sin no es cerrarse de campiña el no acu
duda habrá grande alboroto y se con dir con mas, sino no tenello ni de
firmaran en sus sospechas, y podria el donde sacallo. El portador me dijo de
negocio volar á la córte, y haber re un correo que ahi vino y trajo nuevas
vueltas de que esta señora recibiese tristes, de que en un torneo mató un
algun agravio y pesadumbre que le caballero de la compañía á otro,
costase la vida. V. M., pues la quiere que V. M. lo habia sentido. Alteróme
tanto y la hace tanta merced, lo mie esto mucho, y quedé muy turbado, por
despacio y por poco no se aventure lo don Francisco y don Cárlos y Benamar.
EL FINGlDO REY DE PORTUGAL, - 281
- == l

No lo he dicho á mi señora por no dar- señor mio, y cuan de buena gana las
la pena con este cuidado, y para des pasaria yo todas á trueco de que V. M.
cansar el mio, suplico á V. M. me ha no pasase ninguna, pues no merece del
ga merced de decirme si ha sido la mundo sino lo que él no será poderoso
pendencia entre esos señores ó como de dalle, el que le rige lo haga como yo
ha sido. Plegue á Dios Nuestro Señor se lo suplico, para que se acaben tantas
no haya sido alguna desgracia, que á desventuras, y estas mias intolerables
todos nos cueste caro. Mi señora que de no ver á V. M., que no es este dolor
ria enviar á V. M. á Juan estos dias para zufrido muchos dias sin acabarse
pasados con el machico del médico, y los de la vida; á este riesgo me lo po
cuando preguntamos por él, lo habia ne imaginar el sentimiento que me di
ya vendido para el gasto de su enfer cen tiene V. M. dícemelo su carta, y el
medad y de su muger é hijos, que to que la trujo, y uno y otro han sido pa
davía se están todos malos, y yo y Ro ra mí muy crueles, pues sobre mi
deros, tornamos á recaer por comer sentimiento añaden cosa que tanto le
un poco de vaca y tocino fresco: ya me aumenta. Por cuanto puedo suplicar á
ha dejado la calentura; pero ando flaco V. M. y por aquella alta promesa nues
y mal comedor. tra, que no teme pena ninguna, por—
Andamos el Navarro y yo muy á que aunque á mí está tan bien cansalla
las malas sobre nuestro negocio: no sé á quien me la debe á mil años tendré
en qué parará, que ellos todos me de á mejor partido pasarlos muy tristes,
sean echar de aquí: grande envidia que no que lo esté quien és y será to
tengo á los ojos de esa gente de Bur da mi alegría.
gos, el dia de los caballos, y cada dia Suya soy, señor, ya lo sabe, y esta
ruego á Nuestro Señor, traiga presto y fé que le di guardaré como la del bau
nos guarde á V. M. como el mundo lo tismo á vida y á muerte, pues ni ella
ha menester. ha de ser poderosa á quitalle de mi al
Este hombre no vió á mi señora ma que como inmortal guardará esta
aunque él diga que si, por dar conten eternamente, y mire cuan segura estoy
to á V. M., pero no lo he podido acabar de que no me ofenderá, que le suplico
con ella. De esta su casa de V. M. hoy se entretenga mucho y se espacie, pues
seis de octubre á las seis del dia. Cria esta vida no es solo suya sino de tantos
do de V. M. fray Miguel de los Santos. como lo han menester, y particular
mente mia que me la ha da Dios pa
Copia de la primera carta secreta que ra fin de mis trabajos y de todos nos
doña Ana de Austria dirigió á Ga otros. Esta carta, no la escribo pen
briel de Espinosa (1). sando tendrá ventura de ir, sino solo
por descansar aqui un rato de mis
A y señor que mal se zufre tanta impacientes ansias. Ayer me las dobló
ausencia y tanto como ella se hace sen la niña que estuvo casi todo el dia con
tir que certifico á V. M. que sino me migo, pacífica que no fué poco; de rato
aprovechara de este remedio de gastar en rato llamaba á su padre, debia de
este rato en parlar con V. M., aunque pensar me habia de servir á mí de mas
por estos mal suficientes medios para acuerdo: y como no era posible servia
mi deseo, no fuera mucho acabarme an me de mas dolor.
tes que pudiera gozar de ellos, segun Mientras vienen de Madrid he en
me siento cada dia acordándome de los viado á Valladolid por un vestidillo, que
dichosos que gozé, tanto contento como su ama le ha dejado hurtar la ropa. Co
tuve y perdí, por gran castigo del cie mí con ella y estuvo hecha de oro, es—
lo, injusto lo llamo con muchísima ra ta ya bonita, Dios la guarde. Nieto
zon; pues tan sin ella, me quitó el bien escribió, ha estado, á la muerte, y asi
que no fué poderoso a dármele que ha no ha negociado nada. Dentro de tres ó
tantos años que le grangean mis ojos á cuatro dias envio por él, y antes de
poder de lágrimas y desventuras! Ay quince estará en su casa; yo quisiera
llevaran el ama tambien, porque des
(1) Archivo general de Simancas.—Nego pareciera esta casa de aqui, como V. M.
ciado de Estado, Legajo 172.- 1594). me manda otra cosa no sé si me atreve
36 -
282 CAUSAS CELEBRES
==étº

ré: si fuere será porque convenga asi esta, y si el ir la letra asi le diese fas
al servicio de V. M. La facultad me tidio cuando la lea, que yo no le ten
parece no vendrá, porque dicen que dria si toda la vida gastase en esto,
no la pueden dar sino para personas no sé si por ir escrita con mas fuerza
de estudio, y que esta la ha de dar el de amor que miramiento de lo que á
Santo Oficio ú el obispo, yo la habré de todos se debe las enviaré ú haré pie
entrambas partes y la enviaré á V. M. zas; si fuere tendrá la culpa quien la
á negocialla, y á ver á V. M. quiere tuvo de que la escribiese, si cansare
luego dia de San Miguel fuese Juan con V. M. le dé allá el castigo que quisiere
un machillo para que se quedase allá, como no sea de caer en desgracia de
si agradase y ha recaido con grandes V. M. á quien con deseo de acertar la
calenturas luego el mesmo dia, y por escribió; las amigas y criadas de V. M.
esto y por pensar que cuando llegase están buenas y ocupadas en suplicar á
no hablaria á V. M. se quedó, si hubie Nuestro Señor me guarde á V. M. tanto
ra venido la ropa blanca fuera aunque como á mí, y no mas que aun entonces
se quedara en el camino, pero no he tendré celos de dejalle; no vea á esta
tenido tanta ventura. Yo le certifico á carta nadie aunque se a hermano, que
V. M. mi señor que nunca se me dió na ni del mas del alma puede fiarse lo que
da de no tener la hacienda, sino ahora de ella sale para su dueño; y á Dios,
que quisiera el mundo todo para pone bien mio y mi señor,
lle á sus pies, y créame que si yo fuera
mia que me vendiera muy de buena Copia de la segunda carta que en 6 de
gana á trueco de tener con que servir octubre de 1594 dirigió la monja
le, pero por no hurtarme de mi dueño doña Ana de Austria á Gabriel de Es
supliré de otra manera mi deseo. pinosa (1).
Avíseme V. M. como se llama el lu
gar donde han de hacer asiento, que Rey mio y señor: no quiero tratar
quiero enviar á visitar á V. M. y á de encarecer el contento que con la
traer por fuerza nuevas suyas cuando de V. M. recibí por no atreverme á un
se tardare en dármelas que aunque imposible, pues lo sería decir, con
vengan muy de ordinario serán com Cuanta ¿? al borozo recibe
pradas á grande deseo. E lconfesor mi alma las nuevas de su salud, pode
nuestro ha vuelto á recaer con tercia rosas á darme á mí la vida, cuando de
nas dobles, harto le pido que no se cu mil maneras no debiera á V. M. por
re porque de eso imagino, porfía tanto esta merced que me ha hecho de avi
el mal. Yo debo de ser de bronce pues sarme de su salud y gusto: era suya
resisto á tantos adversarios. Plega á de derecho, pues me la habia repara
Dios que en mí se asuelvan los males, do en tiempo de tanta necesidad, que
y que V. M. esté tan libre de ello co— aunque los dias, al paso ordinario de
mo yo y mucho hemos menester. Los las gentes han sido cortos para mi de
amigos querrían estuviesen buenos, seo, han sido eternos, vívalos V. M.,
particularmente él mi, Francisco á señor mio, y déjeme el cielo verme en
quien beso las manos. V. M. le mande el mio que será estando en poder de
que me escriba nuevas suyas de V. M. mi dueño el resto, pues há tantos años
pues, han ellas solas de ser compañía que está allá de mí la mejor parte, y en
de mi soledad; y no permita V. M. sea ninguna de la tierra mejor empleada.
or muchos dias, que pocos que esce Quisiérale reñir muy de veras porque
da del concierto me serán intolerables, alegan á tantas las razones, que para
para entonces se estarán hechas algu satisfacerme me dice que se echó tan
nas niñerías que lleven, que en esto tas maldiciones, que solo verlas me
pienso entretenerme de aqui á allá, y cuesta tan caro, que es lo menos mu
siempre en regalar á mi , hija que , de chas lágrimas y mala noche. Si mi ig
esto puede perder cuidado. En Madrid norancia, señor, merece pena, no sea
me han avisado hay poca salud, si hu mayor que la culpa, que si no me hace
biere cosa nueva de consideracion yo
avisaré á V. M., á quien suplico me (1) Archivo general de Simancas—Nego
perdone si me he alargado mucho en ciado de Estado, Legajo 172, año 1594.
FI. FINGIDO REY DE PORTUGAL. 283

justicia quejareme de su rigor á él que no se lo debo, y no quiero que re


mismo. Otras mil injurias me hace, ciba tanta merced, que no pienso po
pero quiero sufrir sus cóleras, y hacer nelle en cuidado ninguno con mis pa
en esto oficio de muger, y no reñir en rientes; hermano las cosas grandes pa
ausencia, pues habiendo por fuerza de ra que yo no soy, gobierne, las de la ca
hacer amor tan presto las paces, no sa, dejémelas á mí, no me tome mi
quiero que cuando lea la carta empie oficio; digo esto por esta ama que tie
ce ella la discordia. Solo una cosa no ne que vaya de aquí y desaparezce es
sufro por ser tambien en su ofensa, y ta tienda. Si quiere V. M. que vaya
es que me diga me enviará las mise con la niña, irá hasta que haya que
rias que de aquí sacó eceto los cabe darla como quien es su ama. Si gusta
llos y estampa, cuando todo el mundo de que vaya á otra parte, piénselo en
le hubiera dado, de nada me arrepin tanto que yo envió el propio, y enton
tiera sino de estas dos piezas, porque ces avíseme y escríbala á ella para que
aun me parece que no le han costado lo haga, para cuando vengan, yo ten
muy caras para el precio en que yo dré posada en Velasco-Nuño ó Morale
tenga cosas que tocan en honra, y asi ja, y diciendo que son criados de la
si me amenazare que me afrentará in Vieja, estarán mas encubiertos y mas á
viándome algo, sea esto porque le gusto, que aquí conocerán á V. M. y pa
cuesta dolores dar cosas que solo el recerá trato venir con mudanza de como
decirlas me le causa á mí, y así no di le vieron, y créame que esto es lo me
go sino que si cosas mias, le causaren, jor; el trage no venga muy costoso que
tenga paciencia, pues ni á ellas ni á con llaneza se disimula mas, y esto se
su dueño puede ya dejar de tener por haga así porque conviene, y otra cosa
suya, pues ha tomado la posesion con será dar con el negocio en el lodo. Mi
tanto gusto de entrambos. Bien mio, hija está muy bonita, Dios nos la guar
no quiero que por hacer mal á caballos de, y tan mi amiga que espanta; ya
le hagais á vuestra salud, pues sabeis me llama madre y está tan contenta
lo que me importa. Por mi vida que que creo se quedará conmigo sin mas
sean de manera los entretenimientos, rodeos: con un pomo de plata me dió
que no nos cuesten caros. Imbidia ten en la frente que me levantó cardenal.
go á estas monjas que gozan lo que yo Ando muy ocupada en hacerla camisas
sola sé estimar. Pero qué maravilla! y gorgueras para un vestido que le ha
¡qué imbidia las gentes, quién trocara de traer hoy Roderos. Pierda de esto
su ser hasta llegará veros por ser ca cuidado, que yo le tendré como es ra
lle ú cualquiera cosa de esa ciudad, no zon. El mensagero que enviáre, lleva
puedo entender por que razon se de rá una aprobacion del Santo Oficio y
tenga V. M. tanto en ella; no vaya á su otra del abad de Valladolid, y otra
gente si acaso mi hermano lo ha desme mia por el modo que V. M. me ordena.
recido por alguna via, avisármelo, y si Las horas de mi Señora enviaré con es
le ha dado algun enojo, no remita á te, y sabe Dios cuanto yo quisiera te
otro nayde su castigo, qne yo se le da ner el mundo todo para servir á V. M.
ré como al mayor enemigo. Hoy han que vivo con afrenta de no poder mu
ido por Nieto á Madrid que ha estado á cho en esta ocasion que tanto era me
la muerte, ha de traer unas niñerías nester, que despues Dios dará mas que
para V. M. y así despacho á este hom queramos. Vida mia y mi señor, mire
bre con solo unos vizcochos y una caja si le obedezco en escribirle tierno co
de carne de membrillos y un par de bar— mo me manda, estímelo en mucho,
ros que me han parescido bien y vinie que si haria yo seguro si viese lo que
ron ayer de Madrid y los agnus, lo demás me cuesta de vergüenza y colores.
llevará un propio que haré dentro de Queme esta luego y la que ya con ella
ocho dias. Espérele, señor mio, y en que estaba escrita ha mas de seis dias
respondiéndome pártase por hacerme por entretener en algo mi soledad, y
merced á su gente, que no me confor no quisiera en vialla porque no sé que
mo á que ande mas por Castilla. A le parecerá verme tan distraida y fue
Aquela no tiene á que ir, que yo ha ra de mi paso, pero llegando á imaginar
que no la escribo desde cuaresma por i que aunque me es afrenta ha de resul
284 CAUSAS CELEBRES,
- - -

tar en gusto suyo, echo pecho al agua; que todos buscamos. Mi señor visite
lleno de la de mis ojos me le puso de el Santo Crucifijo cada dia y ofrézcale
cirme que no le olvide por varios pen su cruz que es de muchos milagros, y
samientos. Esta ofensa solo en amor espero nos hará merced. Luisa y su
tiene disculpa, señor, y admitírsela hé hermana besan á V. M. la mano y ha
con que otro dia no le pase por pensa cen el oficio que deben de encomen
miento hacerme tamaña ofensa, y si darle á Nuestro Señor. Yo, aunque
me la hiciere despídame de la merced pecadora tambien, invio mis cortas
que me hace, que no quiero que se oraciones al cielo, él nos oiga y me
emplee en muger de quien se pueda guarde á V. M. mi señor y mi consuelo
pensar tan bajamente. No he menes como he menester.
ter tomar dechado de nadie para te Hoy jueves á las siete de la maña
ner muchas lágrimas, que á fé que es na á 6 de octubre 1594 años.
tas han sacado tantas de mis ojos que Concorda con la carta original se
pudieran borrar esta si con cuidado no gunda que está en el proceso rasga
a defendiese. Mi fé es como mia, que a, y en fé dello de mandato del doc
no hallo caso á que mejor pueda com tor Juan de Llano de Valdés, juez
paralla, por saber sola yo los quilates apostólico en esta causa , lo firmé
que tiene, y asi no hay para que lla siendo testigos á él corregirla con el
marme sin firmeza, pues temer los pe dicho original su merced el dicho se
ligros, no es dejarme vencer de ellos. ñor juez y Juan Lopez de Vitoria, se
De la amorosa hazaña conque me ame cretario de la comision del señor Al
naza no quiero decir nada, que aun calde don Rodrigo de Santillan , en
que quisiera por acabar esta con gus— Madrigal á 10 de diciembre de 1594
to, la materia pasada me deja tan sin años.—Francisco de Santander, nota
él que no acertaré á decir cosa buena, rio apostólico y real.
mas de que no se haga tan bravo, que
ya sabe ha de ser en todo lo que yo Las cartas de Gabriel de Espinosa
quisiere, y primero que lleguemos á ese á que eran contestacion la del vicario
punto tan crudo le ha de costar carísi y las tan apasionadas y ardientes de
mo. Señor mio, váyase luego en en doña Ana no pudieron encontrarse
viándome el propio que digo con mi porque avisados con tiempo por los
hermano, que me da mucha pena ver mensageros que la infidencia del alcai
le por casas estrañas. En tanto que de de la cárcel de Valladolid habia de
envio ocúpese cada dia un rato en es— jado enviase Espinosa, fueron destrui
cribirme y avisarme si acierta esta le das con otros varios interesantes pa
tra; que como soy en ella aprendiz no peles, especialmente la corresponden
seria mucho fuese allá dificultosa. Bien cia con el prior de Crato y los agentes
me parece, señor, que os hagais mu en Portugal.
do en cosas mias que asi conviene; yo Procuró el alcalde, mientras llegaba
os lo vuelvo á suplicar por nuestro la contestacion del rey Felipe II en
amor, que otra cosa no aprovecha y terarse de los pasos que desde su en
dañara muy mucho. Creo que lo es lo trada en Valladolid habia dado el fin
que estareis cansado de tan larga car— gido pastelero; pero éste se habia ro
ta, cuando llegueis aqui, si fuere asi deado de tanto misterio, que única
no la acabeis de leer hasta otro dia que mente pudo averiguar que una tarde
sea mejor recibida. Y digo, señor mio, habia ido á una dehesa cerca de Va
prosiguiendo mi carta, que me aviseis lladolid donde estaban domando unos
cómo os fué con los frailes y si os hi caballos, y que allí con asombro de to
cieron muchas preguntas, y perdóne— dos habia montado los mas bravos y
me hermano si le parecen impertinen cerriles, sujetándolos con gran pasmo
tes las mias y eche la culpa al deseo de los inteligentes, y adquiriendo el
de saber cosas suyas que es insacia crédito del mas hábil y entendido gi
ble. De que el viejo se maltrate me nete de toda la comarca; tanto que es
pesa porque ese no es el que nos im trañando todos semejante habilidad y
porta, haga Dios en todo lo que haya destreza en un hombre de trage tan
de ser su mayor servicio, pues es el plebeyo y comun, le preguntaron quien
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL. 235
--

era, á lo cual siempre habia contesta aumentando á medida que transcur


do que un pastelero de Madrigal. Las riendo los dias, veia el ningun cas o
gentes no querian creer que pudiese que hacia el juez de sus instancias y
tener tal oficio. hasta amenazas.
Esto es cuanto pudo averiguar el Fray Miguel en vano intentaba
alcalde; el que recibió tambien una tranquilizarla y calmar su agitado es—
segunda carta de doña Ana de Austria píritu; el dolor, la confusion y el mie
exigiéndole con toda energía la libertad do que veia pintado en su pálido rostro
de su servidor á quien tenia preso ino desmentia sus palabras. Abismado en
centemente, á quien no podia detener profundas reflexiones, no oia ni apenas
despues de la clara manifestacion que contestaba á las reiteradas preguntas
habia hecho de ser criado suyo, y que de doña Ana.
iba por su órden á vender sus alhajas, Perdíase él mismo en conjeturas,
amenazándole con que le haria sufrir no pudiendo atinar con el motivo de
todo el peso de su indignacion, ya por aquella prision. Fray Miguel con su
no atender a sus razones, ya tambien claro talento abarcaba todo el abismo
por la descortesía de no haber siquiera de males en que podia sumirlos aque
contestado á sus cartas. lla impensada prision.
A purado se veia el alcalde, no sa Era toda su esperanza el que los
biendo como conciliar los respetos de procedimientos judiciales no llegarian
bidos á aquella gran señora, sobrina hasta doña Ama. Esta esperanza quedó
de Felipe II, y al mismo tiempo deseo enteramente desvanecida con la llega
so de no dejar perder la ocasion de da del alcalde don Rodrigo Santillan
descubrir una gran trama que preveia el 14 de octubre á Madrigal, acompa
ocultarse bajo aquel pretesto. ñado de su hermano don Diego de San
A los cuatro dias llegó por estraortillan, el escribano Juan Lopez de Vi
dinario la contestacion tan deseada de toria y los correspondientes ministros
Felipe II. Este rey á quien habian de justicia.
afectado considerablemente las noti Presentóse inmediatamente en el
cias que habia recibido, que en su ta monasterio en donde guardando todos
lento claro y perspicaz conoció todo el los miramientos y consideraciones de
alcance que podia tener aquella cons bidas á una persona real, intimó á do
piracion en un reino donde con dis ña Ana la órden de su prision. Quedó
gusto se sufria su dominacion, mal mi helada doña Ana al oir esta inespera
rada de las potencias estrangeras, ri da noticia: cayó desmayada, y condu
vales de su poder, dió órden terminan cida en brazos de algunas religiosas,
te para que el alcalde Santillan con la fué llevada á su celda, donde despues
mayor reserva, dejando con toda segu de haber reconocido el alcalde todos
ridad al pastelero en la cárcel de Va— sus papeles la dejó presa é incomuni
lladolid, marchase inmediatamente á cada y con centinelas de vista.
Madrigal, pusiese presa en su celda á Procedió inmediatamente despues al
doña Ana de Austria, y procediese in arresto del vicario fray Miguel de los
mediatamente contra cuantas personas Santos colocándolo en una casa segura y
en cualquier modo hubiesen entendi con suficientes guardas para mantenerlo
do en aquel asunto, ocupando los pa encerrado y en completa incomunica
peles y efectos para seguir la pista de cion.
aquel negocio y descubrir lo que no Pasó inmediatamente don Rodrigo
empezaba mas que á traslucirse. Santillan á la casa del pastelero, hizo
Inmediatamente el alcalde se pre en ella un escrupulosísimo registro y
paró á cumplir Io que ordenaba Feli no halló no solo papeles, pero ni ropas
pe II, y para ello se dirigió á Madrigal á
ni aun utensilios del oficio, pues solo
las pocas horas de recibir las órdenes
encontró el horno y las palas. Habien
del rey. do entendido de que algunos dias antes
Imponderable es la tristeza y el al saberse la prision del pastelero ha
desconsuelo que se habia apoderado de bia salido un hombre con papeles para
doña Ana al saber la prision de Espi Portugal, mandó un comisionado con
nosa: tristeza y desconsuelo que se iba gentes de ácaballo para que lo alcanza
286 CAUS AS CELEIBRES.

sen y se apoderasen de ellos: empero iglesia del monasterio de Belen no se


esta diligencia no produjo resultado al encargó á los monjes que aplicasen la
guno y el comisionado se volvió al cabo misa por el alma de aquel monarca,
de cuatro diºs á Madrigal. como era de costumbre, y que estando
Procedió el alcalde á la prision de encargado de predicar el funeral de
cuantas personas habian tenido trato don Sebastian, la noche antes se acer
con el pastelero, llevando á la cárcel có á él un caballero portugués previ
al ama de éste que llamaban Clara, aun niéndole que cuidase de las espresio
que como despues veremos, ese no era nes que en el sermon decia, porque le
su nombre, y á su hija de tres años. juraba por los santos Evangelios que el
Tambien fueron presos Juan de rey se habia de hallar presente y oir
Roderos, criado de doña Ana de Aus lo ; y que al dia siguiente despues
tria y de fray Miguel de los Santos, y que hubo terminado su oracion fúne
Blás Nieto, que era hermano de una bre volvió á encontrarse con él aquel
de las monjas que servian á doña Ana, mismo caballero, y le dijo que el rey
el que á pesar de no haber estado en habia estado presente y le habia agra
Madrigal, habia dado la casualidad de dado su discurso. Repitió la opinion
llegar alli el mismo dia 14 de octubre pública e por aquel tiempo corria en
en que vino el alcalde Santillan. Lisboa, de que el rey don Sebastian
El licenciado Mendez Pacheco, fué habia estado en el convento de San
tambien reducido á prision, y en el Vicente y confesado y comulgado alli.
mismo convento fueron encerradas con Dijo que un fraile de la órden de San
el mayor rigor las dos religiosas servi Agustin, que aun vivia, le habia , ase
doras y confidentes de doña Ana, doña gurado que el rey don Sebastian habia
Luisa del Grado, y doña María Nieto. permanecido algunos dias en un mo
Procedió inmediatamente el alcalde nasterio de cartujos que hay á las in
á tomar declaracion á fray Miguel de mediaciones de Badajoz hasta que lla
los Santos, citando de su órden al pro mó la atencion de los pueblos inme
vincial fray Gabriel de Goldaraz, el que diatos el gran número de provisiones
se hallaba precisamente en la visita de carne y de caza que se llevaba al
entonces de su órden en el monasterio monasterio, porque es sabido que los
de Gracia, el Real, de Madrigal, para religiosos de la órden de San Bruno co
que valiéndose de la potestad espiri men de viernes todo el año.
tual que sobre aquel religioso de su ju Refirió que despues de la desgra
risdiccion tenia, le compeliese á decir ciada batalla de Alcazarquivir era voz
la verdad bajo pena de escomunion. comun en Lisboa que doña Francisca
Asi lo hizo el provincial, y proce Calva, esposa de Cristóbal Tabora, lle
diendo el alcalde á tomar la declara vaba desde Torrevieja al convento de
cion: fray Miguel de los Santos declaró frailes franciscos de Caparica una acé
con el acento de la mas profunda con mila cargada con ropa blanca y comi
viccion, con un aire de candor cual si da, y que era para el rey don Sebas
hubiera pronunciado una verdad in tian. Alegaba como una prueba fuerte
concusa, que él tenia á Gabriel de Es de que viviese don Sebastian, la de
pinosa por el rey de Portugal, sin que que el general que mandaba la escua
je cupiese la menor duda, y que habia dra en la espedicion de Africa, don
tratado de prestarle el favor que un Diego de Souza, en el mismo dia en
pobre religioso podia por compasion y ue se verificó la desgraciada batalla
¿ Alcazarquivir, levantó áncoras y se
por creer que era justo, en lo que creia
no haber cometido culpa alguna. Mani vino á Lisboa, lo que no hubiera ve
festó que quizá podia haberse equivo rificado á no saber de cierto que el
cado acerca de la persona, aunque no rey habia muerto, ó se hallaba vivo,
era fácil por el mucho conocimiento y recoger los dispersos, añadiéndose
que tenia del rey don Sebastian, y la que obró de aquella manera aquel es
seguridad en que estaba de que vivia perimentado general, porque al ano
por muchas razones. Enumeró como la checer se habian embarcado en sus
primera la de que el dia en que se hi buques tres hombres embozados, de
cieron las honras de este rey en la los cuales uno de ellos era el rey.
EL FINGID0 REY DE PORTUGAL, 287
«..." - =

Como prueba de esto citaban el que de la misa para que el Señor le manifes
cuando le ¿ á Diego de tase en donde y en qué sitio se hallaba;
Souza por aquella retirada, tan fuera asegurando que hacia muchísimo tiem
de propósito, poniéndose el dedo en po que en los mementos de la misa se
la boca les decia: «hice lo que no pue le presentaba la figura del rey don Se
do decir, ni pude dejar de hacer;» bastian armado de todas armas, des
debiendo ser una confirmacion de esto cubierta la cabeza, y postrado de ro
el que el rey don Enrique no proce dillas ante la imágen de Cristo Crucifi
dió contra él, ni le impuso castigo al cado: decia que le habia visto llevan
Ull 0. do en la mano un asta con una ban
Contó tambien el haber oido decir dera verde, teniendo una cruz en un
á muchas personas que le merecian lado y una imágen de la Vírgen en
gran crédito que un soldado habia ju el otro, como simbolo verdadero de
rado al rey don Enrique que él mis que el Señor le destinaba á combatir
mo, habiendo encontrado á punto de á los musulmanes y conquistar la
desfallecer al rey lleno de sed, le ha Tierra Santa; añadiendo, que aunque
bia dado de beber mucho tiempo des no era muy crédulo para fiarse de re
pues y á gran distancia del sitio don velaciones, tampoco podia persuadir
de se habia verificado la derrota del se permitiera Dios que fuese engañado
ejército portugués, • por el demonio en un lugar tan sagra
-

Citó que otro labrador le habia vis do, y en ocupacion tan santa.
to algunos meses despues de la ba Contó que al terminar un año de las
talla pasar por otro lado del Tajo á mortificaciones que se habia impuesto
caballo, habiéndose puesto de rodillas habia cesado la vision, y presentádose
en el momento en que le conoció. en Madrigal Gabriel de Espinosa; que al
Afirmó que le habian asegurado los punto que le vió halló en él tan perfecta
frailes de un convento de San Agus semejanza con el rey don Sebastian,
tin que hay en Castelblanco, que en salvo que su rostro se hallaba mas en
otro convento de frailes menores fran juto y aviejado, que al contemplarle
ciscos habia fallecido un religioso en vió lo bien que convenia la finura de su
grande opinion de virtud y santi talle, y su disposicion en las facciones
dad, el que á la hora de su muerte ha del rostro; observó su labio algo caido,
bia declarado á presencia de varios de sus ojos azules, con una nube en uno
la comunidad que él habia confesado de ellos, su cabello que donde no
al rey don Sebastian algunos años des estaba cano era rubio, y al oirle ha
pues de la batalla. - - blar se convenció de que Dios habia
Repitió el suceso de Arcila, orígen cumplido sus deseos y le habia conce
de las voces de que vivia el rey don dido ver al peregrino y perseguido rey.
Sebastian, contando que un soldado Dijo que aun despues de aquel con
que habia sido hecho cautivo en la ba vencimiento quiso asegurarse mas y
talla de Alcazarquivir, habia pasado mas y procuró tratarle con alguna con
pidiendo limosna por Madrigal, , y le fianza, no , habiéndole quedado ya la
habia asegurado que el rey se habia menor duda desde entonces, porque le
embarcado cerca de Arcila con otros refirió cosas que solo el rey don Sebas
tres hombres salvándose en la es tian en persona podia saberlas.
cuadra. Contó que le habia dicho algunas que
Fray Miguel de los Santos reiteró á él mismo le habian pasado bocaá boca
bajo juramento, y sin temor á la es con el rey, y al haberle leido una rela
comunion impuesta por el provincial, cion de la derrota de Africa, le contes
que por estas y otras muchas razones, tó que no eran exactas muchas de las
convencido de que don Sebastian vivia circunstancias y noticias que de ella
y andaba errante y oculto, habia re referia, contándosela con la mayor mi
novado sus oraciones, tomando tres nuciosidad, y asegurando haber salido
disciplinas por semana, ayunando casi de la batalla con tres heridas, en prue
constantemente, haciendo las limosnas ba de las cuales enseñó las cicatrices,
que le permitian sus escasos recursos, especialmente la de un balazo que ha
y ofreciendo diariamente el sacrificio bia recibido en el brazo izquierdo, y
288 CAUSAS CELEBRES

pronto en el campo, falto de me— cárcel como sospechoso de un robo?


ios de curacion, se la habia restañado Contestó el vicario que lo ignoraba, pero
con la arena: que le habia referido que que tal vez seria por evitar el riesgo de
traia consi o doce personas notables, que si esto se sabia, mas pronto conclu
entre las que se contaba un hijo de don yesen con él por quitarle el reino, ó tal
Juan de Austria, mozo de veintidos á vez por el rubor que le causaria el
veintitres años, llamado Benamar, un verse en trage y condicion tan villana.
hijo suyo que habia tenido en Italia de Despues de haber reconvenido el
unos diez y siete años, llamado Cárlos, alcalde á fray Miguel sobre la circuns
y un hermano del rey de Dinamarca. tancia de que teniendo el pastelero se
Fray Miguel de los Santos aparenta gun habia confesado en su primera de
ba estar tan convencido de que Ga claracion en Valladolid, cincuenta años
briel de Espinosa era el mismo rey don debiendo el verdadero rey don Sebas
Sebastian, que rogaba encarecidamen tian si viviese, tener entonces cincuen
te al juez le careara con el pastelero ta, como podia él que debia conocerle
para hacerle confesar á éste la verdad. tan perfectamente decir que era el mis
El juez no tuvo por conveniente ac mo: contestó que la alteracion de su
ceder á esta peticion, mientras no es rostro era efecto de los grandes traba
tuviese mas adelantada la formacion jos que habia pasado; habiéndole con
del proceso. tado el mismo rey, que en una sola
Preguntó don Rodrigo Santillan al noche se habia visto en tan grande
fraile, que era lo que creia haber im apuro y aprieto, que al amanecer ha
pulsado al rey para andar escondido y bian encanecido la mayor parte de sus
errante, y con un trage tan humilde y cabellos; siendo ademas muy probable
ageno de su condicion. que tratando el rey de ocultar quien
Contestó fray Miguel que le ha era se aumentase el número de los
bia confiado el rey las dos causas años.
que á ello le habian movido: la pri Preguntando fray Miguel, con qué
mera, que quedó avergonzado de aque objeto habia comunicado aquel secreto
lla gran derrota , de Alcazarquivir, á doña Ana de Austria y héchola que
por haber emprendido aquella jornada tomase parte en aquel negocio: contes
contra el dictámen y consejo de todos, tó que su objeto habia sido el mas san
siendo tal su dolor y desesperacion, to, para que sus oraciones puras como
que le pareció mas digno pasar por las de un ángel le alcanzasen del Señor
muerto, que no volver á su capital cu lo que tanto deseaba y tambien para
bierto de ignominia y de afrenta, lo que con sus recursos ayudase á soste
cual le habia hecho ir vagando de pue ner con mas decencia al rey don Se
blo en pueblo, habiéndose confiado so— bastian cuando en humilde trage y fin
lo á él en virtud de las antiguas rela giendo el oficio de pastelero se habia
ciones que como confesor suyo tenia: presentado en Madrigal.
la segunda, porque en los momen Nada mas pudo sacar don Rodrigo
tos de mayor apuro de la batalla Santillan del vicario fray Miguel de los
de Alcazarquivir, habia hecho un vo Santos.
to de peregrinar por el mundo en A todas sus preguntas contestaba
trage y apariencia de hombre humilde mostrando la mas firme conviccion de
y bajo, haciendo penitencia por los que el pastelero era el verdadero rey
grandes daños que por su imprudencia don Sebastian.
habian solbrevenido á su reino, cuyo Pasó despues al monasterio para
voto se hallaba cumpliendo, porque interrogar á doña Ana de Austria, á
habiendo pedido dispensa de él al sumo la que suponia ya mas repuesta de la
pontífice Gregorio XIII, este no habia turbacion y sobresalto que le habla
tenido por conveniente el concedérse— causado su prision.
la por no promover nuevos disturbios Encontró á la pobre señora pálida,
y guerras en el reino. abatida, sentada en un gran sillon de
¿Por qué, le preguntó el alcalde brazos. Al entrar en la celda que la
Santillan si es el rey no se declara como servia de prision y mandar retirar a
tal y ha dejado que yo le llevase á la las religiosas que las servian de guar
EL FINGID0 REY. DE PORTUGAL, 289
-=

dia, notó un estremecimiento convul la preguntase, y que nada mas tenia


sivo en todo su cuerpo: procuró con la que añadir. -

mayor finura y atencion tranquilizarla Todavía insistió el alcalde dicién-,


con espresiones afables y corteses per dola que fray Miguel de los Santos
maneciendo en pie y con la cabeza des habia declarado, que le habia puesto
cubierta. en el secreto de que Espinosa era el
La manifestó el sentimiento que le rey de Portugal; que este negocio era,
causaba el tener que molestarla hacién grave.
dola algunas preguntas; pero que se Haciendo entonces un esfuerzo do
veia precisado á ello por las órdenes ña Ana á pesar del visible abatimien
espresas del rey su augusto tio. to en que se hallaba, se levantó del
Doña Ana contestó con la mayor sillon y con aire magestuoso y decidi
frialdad, aunque no sin bastante emo do le dijo: que fray Miguel era el de
cion, que se hallaba dispuesta á con positario de los secretos de su con
testar". ciencia, que no creia que pudiera ha
Entonces la pidió el alcalde respe ber revelado estos á nadie, que no te
tuosamente su permiso para sentarse y nia mas que decir, que se abstuviera
escribir sus contestaciones. de molestarla y molestarse él mismo,
Sentado el alcalde junto á una me porque estaba resuelta á no pronun
sa, casi enfrente de doña Ana, la pre ciar ni una palabra mas en contesta
guntó si conocia á Gabriel de Espinosa. cion á sus preguntas.
Doña Ana en voz apenas percepti Ante una actitud tan decidida y
ble y sin levantar los ojos, contestó una declaracion tan terminante el al
que si. Preguntada que si sabia quien calde se retiró resuelto á consultar al
era: contestó,, que lo tenia por un rey para ver hasta qué punto y en qué
hombre honrado que ejercia el oficio de forma queria que se llevasen con su
pastelero en aquella villa. - prima los procedimientos.
Don Rodrigo le preguntó si habia Era esta una causa anómala como
tenido algun trato ó relaciones con él. casi todas las importantes que hemos
Doña Ana contestó, que le habia visto seguirse en la época de Felipe II.
ocupado en algunas cosas que necesi Su base principal era el secreto,
taba para su servicio, las que habia el órden de los procedimientos el que
hecho con puntualidad y fidelidad. placia al rey marcar, porque con él
Reiteró su pregunta el alcalde, exi consultaban los jueces, no solo los
giéndola le declarase si no habia tra trámites, sino las sentencias, que mu
tado con él de algun otro negocio. chas veces y como veremos despues
Entonces contestó doña Ana que en esta misma causa, enmendaba el
teniendo pruebas de su inteligencia y rey de su propio puño y letra. Ademas
honradez le habia enviado á Wallado de la obstinada resolucion de doña
lid para vender algunas alhajas de su Ana de no seguir entendiéndose con
pertenencia, lo que habia dado moti el alcalde Santillan, á pesar de haber
vo á que él le prendiese y sobre lo vuelto á los dos dias, es decir, el 16
cual le tenia ya escritas dos cartas. de octubre, al convento para interro
Don Rodrigo Santillan reconvino garla y á la priora y demas monjas,
entonces á doña Ana de que no tenia tuvo que luchar con otro obstáculo de
á Espinosa por semejante pastelero, jurisdiccion.
tratándole con gran consideracion y El provincial de la órden de San
deferencia. Agustin, que en un principio y en el
Con dignidad le contestó doña Ana dia de la llegada del alcalde áMadri
que de lo que ella juzgase en su inte gal, se habia prestado á compeler á
rior y de sus apreciaciones, no te fray Miguel de los Santos con excomu
nia necesidad ni obligacion de darle nion para que declarase la verdad, no
cuenta á él. solo alzó su precepto retiró la exco
Insistió el alcalde en las preguntas, munión que habia fulminado, sino
diciendo que tal era la voluntad del rey. que mandó á las monjas no permitie
Con tono algo desabrido , replicó sen mas la entrada en el monasterio
que á S. M. contestaria cuando á ella al alcalde sºnula,
200 CAUSAS CELEBRES.
-
==

Empeñó francamente la lucha con protestad los daños y menoscabos, y


éste, dando el siguiente mandato, do que os quejareis ante S. M. y su real
cumento notable que trascribimos (1). consejo, y donde quiera que vieredes
os conviene de la fuerza con protesta
Fray Miguel de Goldaraz, provin cion, que no lo haciendo asi, se pro
cial de esta provincia de Castilla, de la cederá contra cada una de vos, por to
órden de nuestro padre San Agustin, do rigor de nuestras constituciones.
y vicario general de las Indias, etc. Dada en este nuestro monasterio de
Por cuanto don Rodrigo de Santillan, la Real de Madrigal en 17 de octubre
salcalde de la real chancillería de Valla de 1594 años.
dolid, habiendo venido á esta villa de Post datum: debajo del mismo man
Madrigal en catorce dias de este mes dato y censura mando á cada una de
de octubre so color que dijo venir por las religiosas que si lo que no se es
mandado de S.M., se metió en la clau pera de la prudencia y cristiandad del
sura reglar de este monasterio de Gra dicho alcalde, rompiera las puertas pa
cia, el Real de Madrigal, y aprendió ra entrar en clausura reglar todas las
ciertos papeles tocantes á , la personareligiosas juntas bajen á la misma
de doña Ana de Austria y los llevó en puerta reglar y estén alli todas juntas
una cajuela y los retiene hasta agora, hasta que el dicho alcalde torne á sa
no contento de haber entrado una lir fuera, y no le respondan á cosa
vez, tornó á repetir la entrada otro dia que les pregunte ni hagan cosa , que
domingo á los diez y seis de éste, y fué les mande. Fecho en el sobredicho
al aposento de la madre priora estando dia, mes y año. Fray Gabriel de Gol
ella en cama, y estuvo con ella hablan daraz, provincial.
do en presencia de ciertos religiosos y
religiosas, y públicamente se dejó de Dió el alcalde segun su costumbre
cir que teñià órden de S. M. para po inmediatamente parte al rey de aque
ner cuatro mugeres de guarda á la pre lla nueva dificultad que se presentaba
sencia de doña Ana de Austria, y lo en el proceso, y de la resolucion en
habia de cumplir así, y á la señora prio ¿ se hallaban las monjas, en obe
ra pidió los nombres de todas las mon iencia á su provincial, de provocar un
jas, diciendo que una á una las habia escándalo, lo que hubiera sido alta
de hablar á solas sin testigo ni escri mente perjudicial al secreto con que
bano. Y porque no mostrando el dicho encargaba el rey se condujese aquel
alcalde autoridad y recaudos legítimos negocio que le traia vivamente preo
ara ello no lo puede hacer conforme cupado.
á derecho y justicia por ser monasterio Indignóse el rey, y mandó que in
iglesia, y las religiosas, personas mediatamente se presentase en Madrid
eclesiásticas privilegiadas de jurisdic el padre fray Gabriel de Goldaraz pro
cion temporal: Por tanto mando á la vincial de la provincia de Castilla po
señora priora de este dicho convento y niéndolo preso en el convento de San
á cada una de las religiosas, en virtud Felipe el Real de Madrid, que era de su
de santa obediencia y so pena de ex órden y previniendo al general para
comuníon mayor late sententiae tertia que le castigase.
canonica monitione praemisa, que si el Felipe II para evitar un nuevo con
dicho alcalde don Rodrigo de Santillan flicto y debiendo seguirse el proceso á
viniere al dicho monasterio y pidiere personas religiosas como fray Miguel,
entrada en clausura reglar dél, en nin doña Ana de Austria y las dos monjas
guna manera se le abran las puertas doña Luisa Delgado y doña María Nie
dé, y si dijere que las quemará y der to, mandó dividir la continencia de la
ribará le requieran una, dos ó mas ve causa y que el alcalde don Rodrigo de
ces, y cuantas de derecho son obliga Santillan entendiese solo y siempre
das, que no las haga tal agravio, aten con la mayor reserva en la de las per
to que son mugerés y religiosas y lº sonas seglares y un juez eclesiástico
en las de las personas religiosas. Para
(t) Archivo general de Simancas.-Ne30 esto hizo que el nuncio de S.S. diese
giado de Estado, le8ºjo 172, comision ai Br don Juan de Llanos y
EL FINGIDO, REY DEPORTUGAL. 29.
- -
-

Valdés, capellan de S.M., y comisario sen dado en decir, que era el mismo
de la Inquisicion: instrumento á pro rey don Sebastian.
pósito para todo, y hombre de no muy En la profunda oscuridad en que se
puras costumbres. . hallaba el alcalde, creyó que la que mas
Asi como se habia dividido la conti luz podria darle era Clara, la muger que
nencia de la causa se dividieron tam vivia con Gabriel de Espinosa y cuida
bien los presos: el alcalde Santillan hi ba de su hija, la que le había acompa
zo, por órden del rey, conducir á los ñado á todas partes y con la que se ha
presos seglares á Medina del ¿ bia presentado en Madrigal suponiendo
para que estuviesen con mas seguridad ser el ama que habia criado una niña
y para que con mas secreto y no lla de Gabriel de Espinosa y de una muger
mando tanto la atencion, como en Va muy principal. . .
lladolid, pudiese formarse la causa. A pesar del estado interesante en
Dispuso tambien el rey que otro al que se hallaba, y ya en los últimos dias
calde de Valladolid pasase á Medina su embarazo, el alcalde, con una
del Campo, solo para atender á la cus crueldad propia de un hombre bárbaro
todia de los presos, mientras don Ro y salvage, la hizo poner en el tormen
drigo libre de todo cuidado se consa to, con mengua de la civilizacion, con
graba á la prosecucion de la causa. ofensa de la religion y horror de la na
A Medina fué tambien trasladado en turaleza.
un coche rodeado de arcabuceros, de A su mandato, estremecido el ver
noche, y conducido por el hermano del dugo apretó los cordeles, dió una, dos,
alcalde, don Diego de Santillan, el pro tres vueltas á aquella muger que entre
tagonista de esta causa Gabriel de Es sollozos y desgarradores ayes, y á pun
pinosa. to de ser madre, á cada instante repi
La corta distancia que media entre tió lo que antes de atormentarla ¿
la villa de Madrigal y la de Medina del dicho, y que era la verdad, á saber: que
Campo, facilitaba al juez eclesiástico y era portuguesa, que su verdadero nom
al alcalde Santillan los medios de co bre no era el de Clara, sino el de lnés
municarse y aun verse cuando lo exi Cid; que hacia cinco años que tenia
gian las circunstancias de la causa, au trato é íntimas relaciones con Gabriel
xiliándose recíprocamente para el des de Espinosa con el que habia recorrido
cubrimiento de aquella conspiracion. varios pueblos de Portugal, estable
El alcalde Santillan empezó por to ciendo en ellos una tienda de pastele
mar declaracion y poner en el tormen ría, cuyo oficio ejercia para que no le
to á los reos que habia trasladado á tuviesen por vago: que de cuando en
Medina del Campo; empero ninguna cuando y sin que ella supiese de donde
luz pudo sacar de ellos. provenia, recibia cantidades de dinero
gnoraban todos los proyectos que las bastantes para su manutencion, y
se habian tratado entre fray Miguel de que cuando estas se le concluian ó tar
los Santos, el pastelero Gabriel de Es— daban en renovarse, apelaba á el ejer
pinosa y la monja doña Ana de Austria. cicio de la pastelería: que muchas ve
Solo el médico Mendez Pacheco, ces la decia: Si supieses quien soy y te
sospechó el motivo de su prision, los pudiese llevar á mi casa á Castilla serias
demas hasta lo ignoraban completa muy dichosa. Pero no sali yo de Castilla
mente, ni podian presumirla. de modo que pueda volverá ella al des
Mendez Pacheco, recordaba las pre cubierto. Confesó que habia venido con
guntas que con tanta insistencia le ha él desde Portugal á Castilla, habiéndo
bian dirigido en el dia de su visita en se establecido primero en la Nava de
el locutorio del convento la monja do Medina, y despues en Madrigal. Asegu
ña Ana de Austria, y el vicario fray ró que jamás habia tenido parte en sus
Miguel de los Santos, queriendo como negocios, ni le habia confiado jamás sus
arrancarle la confesion de la semejan secretos. Refirió que á poco tiempo de
za del pastelero con el enfermo que estar en Madrigal se habia hecho mu
habia curado secretamente años antes amigo de fray Miguel de los Santos, e
en Guimaranes, y que tan caro le ha vicario de las monjas, el que todos los
bia costado el que las gentes hubie dias iba á su casa, se encerraban para
º
292 CAUSAS CELEBRES,
==

hablar larga y secretamente sin que ella que creia que pasaba de cincuenta
jamás hubiera podido entender de qué, añOS.
despues se marchaban juntos al con Preguntado que de donde era, , ,
vento, de donde no volvia hasta el ano Contestó: que de Toledo.
checer, comiendo la mayor parte de los Preguntado por el nombre de su
dias alli. Reveló que lo que mas le ha padre, -

bía llamado la atencion, era que hacia Dijo: que lo ignoraba.


poco tiempo llegaron un dia al amane Preguntado por el de su madre,
cer tres caballeros portugueses, con los Contestó; que tampoco lo sabia.
que encerrándose Espinosa habia teni Al instarle el alcalde, diciéndole
do una larga conferencia, que al despe cómo no conocia ni sabia el nombre
dirse los habia visto llorar demostrando de sus padres: repetia que ciertamen
grandísimo sentimiento: y no habiendo te no lo sabia.
querido recibir unas pollas que para Diciéndole entonces el alcalde que
ellos habia mandado asar en el horno era un hombre bajo, se indignaba y
el pastelero. Confesó que la niña que contestaba que era falso.
tenia consigo, y que habia pasado mu Reconvenido de que faltaba á la
chos dias en el convento en compañía verdad, contestaba que tampoco eso
de las monjas que parecian quererla era cierto.
mucho, era hija suya y de Gabriel de Le exigia el alcalde que para que
Espinosa, de quien se hallaba tambien se entendiesen, le dijese francamente
entonces embarazada. quién era: y entonces, tomando un
No pudiendo decir nada de los asun ademan noble y magestuoso le contes
tos de éste ni antes ni despues de su taba que era en vano que le pregun
llegada á Madrigal porque nada sabia, tase quién era, y que pues decia que
rogó la quitasen del potro porque se tenia comision del rey, Felipe II le
moria. conocia perfectamente, sabia muy bien
Mandó don Rodrigo Santillan que la quién era y que escribiese para que
retirasen á la cárcel y procurasen ali-mandase á uno que le conociese, que
viar sus dolores: empero era tal el tras-bastantes habia en la córte que á su
torno que en el tormento habia sufrido lado estaba.
su naturaleza que conoció que iba a ser . Entonces le decia el alcalde que
madre, y aquella misma noche los guar- lo escribiria y sabiéndolo S. M. haria
das que custodiaban su prision avisaron lo que tuviese por conveniente; pero
al juez de que habia dado á luz un que en el entretanto él debia averiguar
"hermoso niño muy parecido á la niña su orígen, y si de grado no lo confesa
que tambien se hallaba cn la cáreel. ba, tendria que hacerlo de otro modo.
Mientras con un celo incansable don Entonces, mirándole altivo y des
Rodrigo Santillan interrogaba á los de deñoso Espinosa con irónica sonrisa
más presos, que nada le decian, porque le dijo: podrá ser que querais darme
nada sabian, y los ponia á cuestion de tormento. Mirad bien lo que haceis,
tormento sin adelantar mas por eso, porque es muy fácil que vengais á pa
iba todas las noches solo sin escribano rar á este mismo calabozo.
ni persona alguna que le ayudase á to El alcalde, aunque turbado al ver
mar declaracion á Gabriel de Espino el aplomo y la seguridad con que le
sa, saliendo de su encierro á hora muy hablaba el reo, le contestó: que él no
avanzada de la noche, ya porque todo tenia que darle cuenta de sus in
lo escribia por sí mismo, como por lo tenciones, y lo que le importaba es
misterioso de las palabras del reo que que declarase contestando á sus pre
le traia vuelto loco, porque cada no guntas.
che sin declarar definitivamente nada, Gabriel de Espinosa le dijo enton
le ponia en nuevas confusiones. ces que lo único que sabiá de su orí
Preguntado, cómo se llamaba, gen, es que al nacer habia sido es
Respondió: que Gabriel de Espi puesto en una puerta de una iglesia
DOSºl. de Toledo. -

Preguntado qué edad tenia, ¿Luego sois hombre bajo? le dijo el


Respondió: que no lo sabia, pero alcalde.
EL FINGlDO REY DEPORTUGAL. 203
== =-es

He contestado que no, respondió l instrucciones eludia siempre contestar


Espinosa, y me importa muy poco sobre el tormento. -

vuestra calificacion. Mientras pasaban dias y mas dias º


Preguntado despues qué oficio te en Medina del Campo sin qne don Ro
nia drigo Santillan, por mas que hacia,
Respondió que primeramente ha adelantase el descubrimiento de la
bia aprendido el de tejedor de tercio verdad, el doctor don Juan Llanos de
los, y luego el de pastelero que ha Valdés trabajaba de un modo incansa
ía ejercido en varios puntos, y últi ble en Madrigal, tomando declaracio
mamente en Madrigal. nes á la priora y á las monjas, que se
A la pregunta de qué especie de hallaban consternadas y llenas de
relaciones y trato habia tenido con aturdimiento viendo presa estrecha
doña Ana de Austria, mente en su celda á doña Ana de Aus
Contestó: que le habia mandado tria, y habiendo tenido el desconsuelo
llamar, le habia encargado pasteles de haber visto arrancar de la clausura
unas veces, y otras cosas, tocantes á de aquel asilo en que juntas habian
su servicio, que las habia hecho fiel y vivido, á sus dos pobres compañeras
lealmente, y que últimamente le man doña Luisa Delgado y doña María Nie
dó á Valladolid á vender unas alhajas to; las dos amigas y servidoras de do
y en donde el alcalde sabria mejor que ña Ana, á las que se habia encerra
nadie el por qué le habia preso. do, estrechamente en una casa parti
Preguntado qué negocios trataba cular. .
con fray Miguel de los Santos, el vi Aquellas infelices, agenas á toda
cario, trama, no tenian mas culpa que haber
Contestó: que de cosas comunes in servido á la mesa á doña Ana cuan
diferentes. do comia con el vicario y el pastelero,
Reconvenido por el alcalde de que y haber creido llenas de sencillez lo
por qué éste al escribirle á Valla que su engañada señora les decia, de
dolid le daba el tratamiento de ma que aquel pastelero era el rey don
gestad, Sebastian.
Aseguró que no habia recibido se Asi es por mas preguntas que
mejante carta. les hizo el doctor Llanos, por mas que
Entonces el alcalde le mostró la sin consideracion á su sexo delicado
carta que hemos copiado, y que le es y profesion religiosa, redobló la es
cribia fray Miguel, carta que con las trechez del encierro, causándolas las
dos secretas de doña Ana que ya co mas terribles vejaciones nada mas
nocen nuestros lectores, habia sido re pudo descubrir.
mitida al rey, y que este monarca ha Doña Ana persistió en un principio
bia mandado reservar porque se com en el sistema del silencio que habia
prometia en ellas el honor de su im adoptado con el alcalde don Rodrigo
prudente sobrina. Santillan negándolo todo: empero mas
Leyó la carta para sí Espinosa, y hábil el doctor Llanos, le enseñó una
con burlona sonrisa contestó al alcal carta de Felipe II, por la que este rey
de que aquello no significaba nada mas con palabras bastante benévolas es
ue el buen humor y genio chancero presaba su voluntad de que se decla
e fray Miguel. rase á su juez.
Admirado estaba el alcalde, no so Entonces doña Ana declaró fran
lo de ver que por mas preguntas y es camente con el acento de la ver
fuerzos que hacia, el preso nada con dad, cuanto habia pasado entre ella,
fesaba, encontrando siempre salidas fray Miguel su confesor, y el paste
vagas é insignificantes ó afectando una lero.
magestad que contrastaba con la si lnsistió con una conviccion profun
tuacion en que se hallaba, sino que á da en que Espinosa era efectivamen
pesar de dar diariamente cuenta al te su primo el rey de Portugal: mani
rey de todo lo que pasaba, y haberle festando que el no haberlo declarado
ido autorizacion para dar tormen antes y puéstolo en conocimiento de
to al pastelero; el rey al darle sus Felipe II, era por el temor que abriga
294. CAUSAS CELEBRES.
= =.

ba de que al saberlo podrian haberle Este notable documento se hallaba


obligado á descubrirse y ocasionársele concebido en estos términos (1).
algun mal. -
El proyecto del rey don Sebastian,
era el mantenerse todavía oculto como Cosa clara es que no se muda la ho
lo habia estado hacia nueve años, y so ja en el árbol sin la voluntad de Dios,
lo á la muerte del rey haberse puesto y de creer es, señor, que quien cuida
de acuerdo con el príncipe de Asturias tanto de todas las criaturas, tendrá,
don Felipe, para que le reintegrase particular cuenta con las que fueren
en su trono; lo que creia poder verifi de mas importancia, y asi creo que ha
car tranquilamente por la gran reli sido providencia suya particular todo
giosidad del príncipe. lo que ha sucedido en estos negocios,
Estaba tan arraigada en el ánimo aunque por camino áspero, para acabar
de doña Ana de Austria la conviccion por aquí otros trabajos quizá mayores,
de que Espinosa era el verdadero rey para cuyo fin ha sido servido sepa Su
don Sebastian, que nada pudieron con Magestad que sois vos, señor, el rey
ella las persuasiones del doctor Llanos don Sebastian su sobrino, y para certi
para hacerla ver que habia sido víc ficarse desto, ha enviado aquí al doctor
tima de un infame engaño. No cabia Llanos, persona muy preeminente y de
en su cándido y puro corazon que su quien yo, por no poderse hacer otra co-. -
confesor, un hombre tan santo, tan sa, y fiar esta tan grande de su pru
virtuoso, tan dado á la penitencia y dencia, se la he declarado por último
á la oracion, hubiera querido enga remedio de vuestra vida, y mi honor
ñarla. - que tanto riesgo corre con otros de
- Creia, tan fanatizada se hallaba por muchos que no tienen culpa, á que co
las infames intrigas del vicario, que mo quien sois habeis de acudir, y asi os,
todo aquello era un ardid político pa suplico por un solo Dios digais á S. M.
ra deshacerse del rey don Sebastian, yy á estos señores sus ministros, que
sois el dicho rey don Sebastian como á
cuya existencia una vez descubierta,
podria ocasionar la desmembracion de mí y al padre fray Miguel lo dijísteis,
España del reino de Portugal: esa gran pues no teneis otro remedio que este
obra de la actividad y política profun debajo del cielo, y creed, señor, que
da de Felipe II. Su Magestad como tan gran cristiano, no
Tan persuadida estaba doña Ana solo no se ofenderá sino que tendrá esto
de Austria de la verdad de lo que ha á muy buena dicha, y pues nunca tra
bia declarado, que propuso á don Juan tásteis de ofendelle, no tratará sino de
de Llanos Valdés, el que le permitiese daros gusto como es razon, y si el verme
escribir una carta á Gabriel de Espino á mí en la tribulacion y afrenta que es-s
sa, escitándole á que declarase al al toy, que por haberos hablado y desea
calde don Rodrigo de Santillan quien do servir como á mi primo que yo es
era, como lo habia declarado á ella timo en tanto, el mundo que no sabe
misma, y á fray Miguel de los San quien sois me levanta muchos testi
tOS. monios de infamia, justo es que quede
Accedió el juez eclesiástico á la es con vos esto que os suplico y es tanta
critura de esta carta que recibió de necesidad. Con el señor doctor podreis
manos de doña Ana, y que inmediata declarar vuestro pecho, cierto que le
mente envió al dia siguiente 20 de no tiene muy deseoso del buen fin de es
viembre á Madrid, para que el rey Fe te negocio que es componerle con S. M.
lipe II determinase si habia de dársele dándole noticia de quien sois, y en
CuI'S0. haberme dado á mi lugar que haga esto
El rey mandó esta carta á don Ro se echa bien de ver que á S. M. ni á
drigo Santillan, el cual en uno de los sus ministros no les pesará de que
muchos dias que iba á tomar declara seais su sobrino, que Dios guarde como
cion al pastelero, le presentó aquella yo deseo. De esta casa de Madrigal
carta autógrafa de doña Ana en que le
suplicaba declarase quien era, pues á (1) Archivo general de Simancas.—Nego
-

todos importaba tanto. - ciado de Estado, legajo, 172.


EL FINGlDO, REY DE PORTUGAL. 2,93
=

á 19 de noviembre de 1594. Doña Ana haciendo esto por lo mismo, si no me


de Austria. hubieran avisado que á V. M. le da cui
dado imaginar que ese pastelero sea
- Parecia que con esta carta debia don Antonio ó cosa suya, lo cual no he
Gabriel de Espinosa reputarse perdido podido llevar en paciencia por la ofen
y creer descubiertas de un modo indu sa que fuera de V.M., ni es de mi hon
dable todas sus tramas: empero hom ra imaginarse de mí una maldad tan
bre de imperturbable serenidad se li grande, que no tenia color de bien
mitó lejos de declarar nada, á contestar ninguno, pues no se puede esperar de
soltando una carcajada, que todo aque un enemigo tan declarado, que esto
llo sería una chanza con la que habia bastaba para que él no se atreviera á
querido divertirse á su costa la monja, venir á mí, ni yo le escuchara sin dar
repitiendo que él jamás se habia pre aviso á V. M. al punto, aunque él me
sentado como rey, ni hablado de mate prometiera los tesoros del cielo por
rias políticas con la monja y el fraile. ello, y en cuanto á esto no quiero can
Nada mas pudo sacar el juez de el sar á V. M. porque cuando se imagina
pastelero, á quien por mas que apura se esto en satisfaccion de mi inocencia.
ba y aun amenazaba, contestó que ha me dejaria echar en un horno ardiendo,
bia dicho la verdad y que todos los y fiaria de Dios habia de justificarme. La
tormentos del mundo no bastarian pa verdad es que él me dijo que era el rey
ra hacerle decir otra cosa. don Sebastian y yo le importuné me di
Doña Ana esperaba que con la car jese quien era, por los indicios claros
ta , que habia escrito, que entregaba que sus razones daban de ser el mis
á don Juan de Llanos Valdés se aclara mo, y ansi me lo confirmó con muchas
ria el negocio que tan grandes dis razones; y preguntándole yo que por
gustos le ocasionaba. que andaba así, me dijo que lo habia
Dolíale haber incurrido en la des jurado sobre el Santo Sepulcro, y en
gracia de su tio Felipe II; imploró su tendidas sus razones que queria él ga
perdon en una carta que el doctor Lla narle primero que descubrirse. Habíá
nos le permitió escribir delante de él bame siempre con tanta aficion del
el mismo dia en que habia escrito pa servicio de V. M. y tan sin codicia de
ra que dijese la verdad á Gabriel de quitar un palmo de tierra de su coro
Espinosa. na, que éste fué el anzuelo principal
Esta carta á que no contestó el rey con que me engañó juntamente con ver.
Felipe II, era la siguiente (1): yo que era sobrino de V. M. tan queri
do, d que el dia que él paresciera di
Señor: si V. M. pudiera ver mi co ciendo verdad, V.M. se holgaria de
razon y en él la razon porque ha dejado ello. El mostraba mucha voluntad, y
de hacer esto desde el primer dia de por tenerla yo á cosas de mi señora la
estos desventurados negocios, que ha princesa doña Juana por la merced que
sido temor de no saber si acertaba en hizo á mi padre, me descuidé en creer
el real servicio de V. M., estoy cier le algunas veces, y en regalalle y ha
ta que Vuestra Magestad quedara sa celle el bien que podia. -

tisfecho y yo disculpada de mi yer Es verdad pura que muchas veces


ro. Y si dolor á Dios le satisface de dudaba tanto que despues de ido de
los que contra su Divina Magestad co aqui, examinaba, la verdad como po
metemos, bien sé que el que tengo de ¿dtengo declarado en mi dicho, y
estar en desgracia de V. M. por ser que deseaba aquel hermano que él de .
mayor que jamás por mis pecados le cia que yo tenia, y esperaba aqui para
he tenido, bastara á alcanzar el perdon Todos Santos ó Navidad para informar
que yo espero de su clemencia de V. M. me dél de lo cierto, y si lo fuera dará
pues como padre ha de usar de miseri V. M. aviso de ello y suplicarle humil
cordia conmigo, pues erré de ignoran demente se sirviera de aquel hermano
cia y pudiera perseverar en ella, no que él me decia tener, y los indicios
que de antes tenia de que habia el tal
(1 Archivo general de Simancas—Nego hermano tengo referidos en los dichos
iado de Estado, legajo 172 año 1594), que V. M. habrá mandado ver, esta
296 CAUSAS CELEBRES.
--
Lº-e

era la venida y los caballos á solo ver tiandad de V. M. se sufre ni en mi fla


me, y no sacarme del monasterio como co sugeto, que cuando mande le haga
han dicho, que quien por no disgustar mas ofensa, la que padece mi honra
á V. M., se encerró en él sin su volun bastará para acabarle. Yo ha dos dias
tad, no saliera dél sin la de V. M., que tengo escrita esta y por no haber
pues en este estado y los trabajos y habido oportunidad se ha detenido. Si
padecimientos dél solo, tengo por ali V. M. fuere servido, que pues es esta
vio que servíá V.M., l lo tengo por la pura verdad pase por verdadera re
bastante paga. A don Rodrigo negué lacion, porque estos negocios no se de
este punto solo, y en lo demas dije tengan y padece mi honra. Sino haré
muy llanamente la verdad, y no en lo que V. M. mandare. Cuya católica
tiendo ofendí en ello mi conciencia, persona guarde Nuestro Señor como el
por cuanto nos da Dios en eso liber mundo ha menester. Y yo aunque in
tad. Y él no sé yo si me tomaba jurí digna, le suplico de esta casa á 19 de
dicamente mi confesion, por muchas noviembre de 1594. Doña Ana de
razones que hacen en mi seguridad, y Austria
el negar yo esta persona ser el rey, hí
celo no por encubrirlo á V. M. para li Seguia el proceso con el mas es
brarle á él, ni por ningun intento, sino quisito secreto, escribia el mismo al
porque como yo por ignorancia no avi calde Santillan las declaraciones, pero
sé luego á V. M., lo uno, por no tener ya por las conversaciones que Espi
or cierto que el dicho fuese el rey, nosa tuviera con el alcalde, ya por
o otro, por esperar saberlo de mi her lo que transpirasen los mismos guar
mano, no queria que confesándolo co das, empezó á susurrarse la gravedad
mo lo hiciera desde el dia primero, de aquel misterioso proceso. Unos afi
V. M. condenara el no le haber avisa cionados á lo maravilloso, decian que
do, por no haber sido malicia sino igno era el mismo rey don Sebastian, otros
rancia, de no saber era obligada por un embustero farsante, dividiéndose
haber entrado aqui de seis años, y no las opiniones entre los que en voz
saber del ¿? mas de lo amargo baja y con la mayor cautela se ocupa
dél, que todo se ha guardado para mí. ban de asunto: lo cierto es, que Es
Esto es, señor, lo que tengo en es pinosa era un hombre estraordinario,
te negocio y por muy cierto que ese que su instruccion su talento, sus
hombre es engañador que por órden del finos modales revelaban un alto orígen
demonio vino á turbar mi honra, y á y una esmerada educacion.
destruirme quitándome de la gracia de El mismo doctor Llanos de Valdés
V. M. á quien humildemente suplico ¿ habia ido algunas veces desde Ma
por Jesucristo crucificado se compadez rigal á Medina para verle y hablar
ca de mí, y mire que esta honra que con él, participaba del asombro en
tanto sus ministros de V. M. despe ue tenia al alcalde Santillan, y un
dazan, es de una sobrina hija de aquel ¿ al salir de su calabozo se habia
desdichado padre, y que mi yerro fué dejado decir: º
simpleza y el castigo mucho para él. Si No es posible sino que este hombre
ese hombre es malo ó bueno háganlo sea algun principe segun obra y pa
con él, y no permita V. M. que lo pa 7"CC6.
gue esta desdichada, y esta casa y Agréguese á esto la tardanza de
tantos presos inocentes qne no tienen Felipe II en resolverse á mandar se
culpa. º aplicase al tormento á los tres princi
De V. M. soy y á vuestros reales pales cómplices de esta causa, Espino
pies me pongo. Si no merezco perdon, sa, fray Miguel de los Santos y doña
ni basta por castigo verme sin hon Ana de Austria, á pesar de habérselo
ra y sin interés con tantos jueces y propuesto repetidas veces tanto el
presa, á cortesía de tantas lenguas juez eclesiástico como el civil.
que por verme en tribulacion oscure Indudablemente á pesar del admi
cen lo bueno de toda mi vida, V. M. rable sigilo que se observaba por am
corte en mí á su voluntad y no por bos jueces en la prosecucion de esta
este rigor, pues ni en la mucha cris causa, habia personas que en él toma
EL FINGlbO REY DE PORTUGAL: 297
=

ban interés y se mostraban bien ente hace, y que pues su celo é intencion es
radas, y traiaron de influir atemori tan buena, (que de eso no se duda)
zando y llamando la atencion de los prosiga con medios proporcionados pa
jueces. ra acertar una cosa que tanto importa,
En un mismo dia, aunque residien cual sería consultar persona ó perso
do en los dos diferentes puntos de nas de conciencia y letras teológicas,
Medina y Madrigal, encontraron cada aunque es juzgar de muchas cosas que
uno de los jueces una carta anónima se ofrecen en semejantes casos: y mien
que les habian echado por debajo de tras esto V. no hiciere, ni su buena in
la puerta de su habitacion y cuyo te tencion le escusaria si errase, ni creo
nor era el siguiente (1): segun veo ir caminando el negocio, de
jará de errar y hacer quiebra, que por
Señor: el negocio que V. trae en ventura no podrá soldar en todos los
tre manos es tan grave, que tiene á dias de nuestra vida. No lo fie W. ni se
todo el reino á la mira, y muy en par contente en ir dando cuenta al rey de
ticular á sus servidores, viendo el
todo lo que va haciendo (como enten
daño y provecho que dél le puede re demos todos lo hace) que aunque esa di
sultar, no pueden dejar de ser comba ligencia es muy buena y necesaria, y
tidos de temores y esperanzas; y aun que con ella se pudieran escusar con
que poniendo los ojos en solo lo tem sultas de acá, si todo lo que acá se sa
poral, hay muy poco ó nada que te be se pudiera escribir ó decir allá, y si
mer; porque con la prudencia. y dis todo lo escrito se pudiera leer, y todo
crecion que Dios ha dado á V. y con lo leido consultar. Mas bien se deja
la que en particular se ha esperimen entender que con los muchos negocios y
tado en este negocio no puede dejar ocupaciones en que allá se encuentran,
de hacerle muy á gusto de S.M., y no se podrá atender tan de propósito
salir dél con mucha medra y en muy al que V. trata, como se entendería
aventajado premio: pero no sé si el del acá, y que no harán poco en leer to
cielo está tan seguro, que no todas las das las cartas que V. escriba y otros
veces los dos premios van á una: an le han escrito, sin ponerse á leer ni
tes muchas aprueba y premia la ma consultar muy despacio todo lo pasa
gestad del suelo, que las condena y do. Y no dudo yo que el temor desto,
castiga la del cielo, y al contrario, ora y de no cansarle, habrán hecho á V.
sea por tener estragado el gusto los re dejar de escribir muchas cosas. Y asi
yes, dándose por servidos de cosas que me parece y parecerá siempre muy ne
no se hacen sin ofensa de Dios, ora por cesario, hacer acá la diligencia que he
el desórden y ambicion con que los dicho, y crea V. que quien esto le es
ministros pretendiendo por esta via cribe le desea servir y que fuera del
ser premiados, se adelantan á lo que bien comun, ninguna otra cosa le mue
ni la ley de Dios permite, ni la volun va, y que no habla de su cabeza, sino
tad del rey á quien sirven, permitiera con parecer de personas doctas, reli
si lo supiera ¿ y porque giosas y prudentes, y si V. quiere sa
por una parte de lo primero, nos ase ber la razon y razones que hay de re
gura aquí la gran cristiandad de nues parar, que yo me ofrezco de apuntár
tro rey, y por otra despues que este selas en otro papel que vaya por el
negocio pasa por mas manos que al mismo órden que va éste, que por jus
principio, se van trasluciendo cosas tos respetos é inconvenientes, no se
del que hacen temer un gran daño y quiere dará conocer el que esto escri
yerro muy perjudicial para el alma ó be. Podrá ser que algun dia cesen
almas de los jueces, y para las vidas, quite la máscara, y entretanto esté V.
honras y haciendas de los que han de seguro que ni es portugués, ni tiene
serjuzgados, suplico á V. cuan encare parentesco con ninguno de esa nacion.
cidamente puedo, mire muy bien lo que Ía señal cierta de que V. quiere le
envie estos apuntamientos, será si á la
(1) De un manuscrito existente en la bi mañana vá á oir misa á la iglesia de
Sahagun, y el no ir tendré por respues
blioteca del real sitio del Escorial, copiado
por su bibliotecario don José Quevedo. ta de que no s de ello, y lavaré
298 CAUSAS CELEBRES.
=-a

mis manos. Quiera Dios que sea entre que parece gusta V. y aun debe gustar
inocentes! S. M. se entienda, es que él es un
hombre bajo, que fingió ser el rey don -
Comunicáronse los jueces el es Sebastian con parecer y acuerdo de al
traordinario anónimo que habian reci gunos personages, que por esta via,
bido, y º nada tenian que temer, segun se entiende, pretendian hacer
porque en el proceso consultaban paso conspiracion y levantarle por rey de
á paso todo con el rey, aunque no po Portugal, en fallando el nuestro (Dios
dían figurarse que aquel anónimo fuese le guarde muchos años) lo cual á ser
alguna nueva trama del pastelero ó del asi iba el negocio llano y liso pues con
fraile por el estado de estrechísima esto quedaba justificado cualquier cas
incomunicacion en que se hallaban, tigo que se hiciese con este hombre, y
creyeron que habria alguna otra per en cualquiera que se hallase cooperan
sona perfectamente enterada en la tra do en una tan grande y calificada trai
Ina que permanecia oculta y que hasta cion y se daba muy buena salida á la
entonces habia podido escapar á su ac comunicacion que con este hombre se
tiva y celosa vigilancia. sabe haber tenido la señora doña Ana
Trataron pues de ver si podian des de Austria, porque ninguna mejor que
cubrir al misterioso autor de las cartas, haberse fundado en falsa y engañosa
si no aprovecharse al menos de los persuasion de que era el rey don Se
âte y observaciones que ofrecia. bastian. Pero supuestos los indicios y
Acordaron que don Rodrigo Santi evidentes conjeturas, que hay en con
llan iria al dia siguiente á oir misa á la tra de esto, ningun hombre cuerdo ni
iglesia de Sahagun enviando á sus gen que tenga un poco de entendimiento,
tes allí con órden de que observasen se lo persuadiera, y asi, ni se cum
si alguno fijaba en él de un modo no ple con Dios ni las conjeturas son ver
table la atencion ó concurria á la igle daderas, (como luego diré) ni con los
sia alguna persona forastera, ó que ba hombres que las tienen y tornan sin
jo de cualquier concepto pudiese ins duda por tales; ni se ataja el fuego
pirarles la menor sospecha. y alteracion que se podia levantar en
Nada observó el alcalde Santillan, Portugal, si entendiesen que su rey
nada tampoco sus activos y vigilantes ó el que tiene á su parecer algun de
espías. recho al reino, es castigado en Casti
Al dia siguiente sin saber como, y lla debajo de figura de hombre bajo y
á pesar de lo prevenidos que estaban traidor; y quiera Dios no haya ya co
todos sus agentes y criados, encontró menzádose á levantar esta llama, que
con grande asombro suyo sobre la me supuesto el gran número de portugue
sa de su despacho el siguiente escri ses, que se sabe haber acudido á Ma
to (1). drigal de pocos años á esta parte, á vi
sitar á la señora doña Ana y fray Mi
Señor, por contarme que V. recibió guel, harto es de temer que á la hora
y leyó un papel que le envié el dia pa de esta, viendo descubierta su celada,
sado y haber sabido que oyó ayer mi estén bien alborotados; y para que V.
sa en Sahagun, me doy por respondi vea el fundamento con que hablo
do de que se sirve que haga este ofi pondré aqui las conjeturas con la ma
cio; y asi le hago muy de buena gana, yor brevedad que pueda.
1quiera Dios sea de algun provecho! Todo el mundo sabe que fray Mi
que mi intencion al menos buena es, guel tuvo particular conocimiento y
y el deseo grande de que se acierte trató con el rey don Sebastian como
eon el mayor servicio de Dios y bien quien le crió y predicó mucho tiempo,
de la república. y asi no puede haber duda en que él
La fama que hasta ahora se ha no pudo padecer engaño en tener por
echado de este negro pastelero, y lo don Sebastian á quien no lo era; por
ue por mas señas que dél tuviera, no
¿ de
(1), Biblioteca del Escorial, manuscrito pu faltarle algunas bastantes
¿º por el bibliotecario don José Que infinitas en que forzosamente le había
VeQ10, de dar alcanze, examinándole y pre
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL. 299
Qº-= =E

guntándole de ellas y mas con tan lar Y fuera de esto, no es de un áni


ga comunicacion como ha habido entre mo vil y bajo, desechar grandes rique
los dos en Madrigal, con lo cual no ha zas, y es fama pública, que siendo im
brá hombre en el mundo que se per portunado este hombre, á que recibieso
suada, que fray Miguel tuvo á éste por una cruz de diamantes de valor de 800
don Sebastian no siéndolo. Tampoco ducados, y otra joya que valia 600, que
habrá quien se persuada que no te la señora doña Ana le daba y traza pa
niéndole por don Sebastian ni por don ra poder seguramente venderlas por
Antonio ú otro personage, que él pu via del arzobispo de Burgos, á quien
diese persuadirse que tenia accion al para esto le encaminaba; no se recabó
reino de Portugal, sino por hombre co con él que las tomase. Y si fuera hom
mun y bajo, quisiese venderle por don bre bajo ¿quién duda que se cebara
Sebastian, y procurar que como tal de la presa de manera que no se le
fuese reconocido por rey á su tiem pusiera delante , que podia esperar
po, haciendo un engaño tan grande á otra mayor? Indicio, pues, es este
la señora doña Ana, con quien ¿? grande de serlo la persona.
es pública voz y fama) la tiene despo Dejemos pues por cosa llana, que
sada y una traicion tan enorme á su supuesto lo que, se ha entendido, y
patria, á nuestro rey (y lo peor es) al aqui se ha referido, este no puede ser
del cielo haciéndose cargo de no me hombre bajo, sino persona grande y
nos que de un reino entero: y digo muy grande, en quien en alguna mane
que ninguno se persuadirá esto de fray ra, cupiese tanta cortesía como la se
Miguel por ser tenido de todos cuan ñora doña Ana y fray Miguel y los de
tos le conocen y no conocen por un mas le han hecho, y en quien cupiese
gran religioso y muy siervo de Dios y tener algun color (siquiera aparente)
muy devoto y prudente, y de gran á la pretension del reino de Portugal,
caudal de entendimiento, y es duro de y no es dificultoso de entender, que
creer de un hombre tal, un disparate S. M. tiene grandes prenuncios de eso,
tan grande, y que sin qué, y sin para pues vemos que por una parte se usa
qué quisiere irse al infierno porque un de medios y rodeos para saber quién
hombre bajo, quedáse triunfando, y es el ¿? por otra ni envia quien
cuando , el estuviera fuera de juicio le conozca, diciendo el preso pública
(que sabe V., cuan fuera es de eso) y mente que el rey sabe muy bien quien
diera en un desatino como este ¿cómo es, y si no, que envie quien le conoz
V. que se crea, que los demas ca que hartos hay, ni hay mencion de
e su nacion que entraban ó debian darle tormento ni tocarle el pelo de
entrar en la conjuracion, viniesen á la ropa, y claro es, que á no haber
sujetarse y rendirse á un hombre vil, espresa prohibicion del rey, le hubie
y elegir para con tan grande persona ra V. dado sesenta tormentos: cuanto
tan pequeña, habiendo tantas de tan mas que por otra via se sabe, y es
diferente calidad entre ellos, que to muy público en Valladolid, que la hay,
maran para sí esa suerte y arriscaran por haber dicho el presidente, que en
con el mismo peligro por entrar en la la cédula que á él le vino de S. M. pa
conjuracion, y darle honra y provecho ra enviar al alcalde Portocarrero y al
á otro, que ni le tocaba, ni lo mere gunas personas, se hacia mencion de
cia? Y es mas fuerte esta razon, por eso, que para que V. entienda que no
ser vivo don Antonio, el cual sabemos hablo de mi cabeza, gusto de traerle
que por mandar y ser cabeza, traia testigos tan abonados cuanto puedo
muy desvanecida la suya y su persona sin daño de parte.
fatigada ¿ y que ninguna Pues si este es persona de la cali
nueva hubiera mejor para él que en dad que he dicho, parece no puede ser
cargarle esta empresa de la manera sino don Sebastian ó don Antonio. Si
que se dice haberse encargado á este es don Sebastian, visto está es agravio
hombre, y encargándose él de ella cla que á él se le hace en tenerle como le
ro está cuan á gusto fuera de los de tienen, y que seria mucho mayor si
mas, y cuanto mejor le estaba que en pasase el negocio adelante, y le quita
cargarlo á un pastelero. sen la vida oculta ó descubiertamentp,
e
e.
300 CAUSAS CELEBRES.
-
-

ó le privasen del reino, pues para nada sacará de la cabeza de los portugueses,
desto hay título ni bastante razon, por que se tuvo noticia de quién era, y de
ue no lo es el haber él negado que es que por tenerla le despacharon, y no
¿ Sehastian, en lo cual parece renun es menester mas, para que ellos ten
ciar el derecho al reino, que esta ne gan alguna justificacion para revolver
gacion ya se sabe que es involuntaria, y el mundo diciendo que mataron en
á mas no poder, por el temor que tiene Castilla á su rey, y aunque nunca lo
que en declarándose le acabarán ocul Sea es menester advº esto y hacer
tamente: y asi no escusaria eso al rey una evidente demostracion de que ni
y á los mínistros que lo supiesen, si es don Sebastian, ni tiene que ver con
aprovechándose de esa ocasion le cas él, porque de otra suerte el rumor que
tigasen ó quitasen el reino: y cuando agora anda y que la señora doña Ana
él cediere libremente (que no cederá) y el dicho fray Miguel han publicado,
el derecho que tiene, claro está que de que es este don Sebastian, será
fray Miguel y todos los demas que en bastante á causar la alteracion que he
este negocio se hallan culpados, no ce dicho.
den el que tienen de no ser infamados Pues si este no es don Sebastian,
injustamente ni con falso testimonio del discurso que tengo hecho se saca,
como seria decir que levantaban por que es don Antonio, ú otro personage
rey, al que no lo era, que siéndo tal, y porque otro no parece quien
lo como ahora supongo y ellos claman puede ser, y de don Antonio hay los
que lo es, seria hacerles un notable indicios que luego diré, hablaré en ca
agravio, é imponerles una traicion que so que sea don Antonio que lo que en
no les pasa por el pensamiento, sin él dijese podrá tener por dicho en ca
oder colorearla con decir, que ellos so que sea otro en quien concurran las
e tuviesen por tal, porque como he razones que en él concurren. Y cuanto
dicho, vese claro que no pudo fray á lo primero si este es don Antonio, ya
Miguel padecer engaño en esta parte, veo que es muy diferente caso que el
asi será una gravísima ofensa de
biº, el usar de este remedio, aunque pasado, y que á lo menos en cuanto to
ca á la conciencia hay menos peligro de
fuese para con él alcanzar la paz del error; porque aunque á él le parezca
mundo y conseguir el mas alto fin que que tiene algun derecho al reino, y
se puede imaginar; porque ya sabe V. aunque demos que le tenga, (porque
que no se han de cometer males para comprendamos otro cualquier persona
que de ellos resulten bienes: y asi ge de los que tenian mas accion que
uedarian los autores y cooperadores él), este es un derecho muy dudoso, y
e este hecho en perpétua obligacion el del rey nuestro señor mucho mas
de hacer una pública satisfaccion y res cierto y con posesion; y tal traicion po
titucion de forma, etc. dia tener armada en razon de poder
Y todo esto suplico á V. advierta levantarse con el reino, que mereciese
muy bien para lo que abajo diré y jun ue le quitasen la vida, y aun sin na
tamente que fuera de la ofensa que á de eso, tales delitos podia haber
Dios se hacia, si acaso fuese como voy cometido en otro género en el ministe
aqui pintando, no se cumplirá con los rio, que cuando por cosas de atrás no
hombres, ni se conseguirá el fin que se tuviera merecida esta pena, por ellos
pretende de la paz y quietud de en la mereciera, en lo cual no me entro
trambos reinos, antes se pondria un meto, pues no se lo que hay, ni es mio
claro estorbo para ella, y se daria la el juzgar de esto. Pero porque esa pena
mayor causa de alteracion á los portu se le podria dar descubiertamente,, y
¿ que darse puede. Porque la ver con manifestacion de su persona y de
ad que queramos, que no queramos, lito, ó encubiertamente á lo menos
ha de salir á la luz y mas con este caso, cuanto á la persona, publicando que es
donde es cierto haber muchos papeles un hombre tal y bajo, que se hacia don
secretos que la descubrirán á su tiempo Sebastian, y queria levantarse con el
y darán evidentes testimonio de quién reino de Portugal, y parece que el ne
era el presó, y no faltará quién le dé gocio va encaminañdo de manera e

de que fué conocido, y con esto nadie se tomará esta segunda traza y ¿
EL FINGIDO REY DE PORTUGAL 30
-

ré los inconvenientes que en ello se me guel no quiera confesar que es hombre


representan. bajo el que dice que es el rey don
El primero toca á la conciencia y Sebastian, por dar mejor color y sa
es, que aunque por parte del principal lida á lo que ha hecho, que ningu
delincuente, que ahora supongo ser na podia ser mas conforme á su ¿
don Antonio, no haya que reparar que nor dél y de los demas que andaban
su condenacion se haga desta manera en este trato; y si una vez se viese
ó de la otra, dado que es merecedor convencido de que este no es el rey
del castigo que en él se hiciere, pues don Sebastian y que ó de ser tenido
aun él mismo desea, y con razon, que por don Antonio ó por un vil hombre,
habiéndose de hacer no sea descubier no hay duda sino que declararia que
ta su persona: pero de parte de fray es don Antonio y tendria por muy me
Miguel y los demás, no me parece cosa jor que todos entendiesen que lo es: y
tan segura, por ser muy diferente deli asi por negarlo ahora en ninguna ma
to el dar ó levantar por rey al que tienera es justo consentir en que se di
ne ó podia tener algun derecho verda a, ¿ el que trataba , como rey es
dero al reino, ó aparente: que el hacer ombre bajo, no lo siendo, sino perso
otro tanto con un hombre vil, que nin na tan diferente. Este es el primer in
guna accion tiene, ni aun méritos para conveniente tocante á la conciencia,
ser lacayo de los que tanta cortesía le el cual si tiene algun fundamento V.
hacen, y redundaria en mucha mayor lo verá ó consultará con quien mejor
infamia de las dichas personas el ha le pareciere.
ber cooperado á esto segundo, que á lo El segundo toca al fin que se pue
primero, y asi se les hacia un notable de pretender en ocultar la persona de
agravio, en imputarles esta segunda don Antonio, que es evitar escándalo
culpa y ¿ por ella, aunque y alteraciones de portugueses, el cual
tengan merecido todo ese castigo que no se alcanzará por este medio, pero
se les dá, y ya he dicho que ningun fin es de temer todo lo contrario por la
puede justificar el medio que tiene in razon que arriba dije. Lo mismo en ca
trínseca maldad, cual es el infamar á so que este fuese don Sebastian, por
uno de delito que no lo ha cometido; y que no hay duda sino que ello se ha
asi no basta pretender por este medio de venir á entender por mil vias que
atajar otros mayores inconvenientes ahora están ocultas y luego no estarán,
que el de descubrir quien es el preso y y será mucho mayor el sentimiento y
habiéndole de castigar, podrian resul alteracion de Portugal; y la presun
tar muchos menos. Basta que el dicho cion contra el rey si ven que se apro
preso niegue ser don Antonio ó perso vecha de la figura de hombre bajo que
na tal y que afirme ser hombre bajo, ahora tiene el preso, para debajo de
que se fingiese ser el rey don Se ella castigarle y despacharle oculta
astian, que esto ya se sabe por lo que mente ó descubiertamente, que si ven
lo hace; y aunque lo haga por lo que º declara la persona y convencido
quisiere, no importa, que no puede él e delito que lo merezca hacen cual
¿ á fray Miguel y á los demas el quier castigo con él, y como quiera
erecho que tienen á su buen nombre, que ello sea, V. entienda que en el
y á la opinion en que el mundo los tie punto que el negocio está, y en lo que
ne y debe tener, ya que se sepa la de él se ha entendido, aunque en rea
verdad, que encubierta redundaria en lidad de verdad éste fuese un pícaro,
tanta infamia suya. Y asi, si realmen es menester jugar tan al descubierto,
te se sabe que es don Antonio y se que todo el mundo vea que es tan cla
tiene tal verosimilitud que no se puede ro como la luz del medio dia.
pretender ignorancia hay obligacion de Pero no sé como ha de ser posible
descubrirle por tal, ó dar traza como persuadir esto á gente de entendi
fray Miguel y los demas que vivan li miento con las cosas que hay de por
bres en la opinion de todos de la culpa medio que son hartas mas que las que
que no cometieron, y de la infamia he tocado, que no todo se puede decir
que se les consigna. y mas por escrito.
Y no basta que el dicho fray Mi Fúndome en que á V. le pasará es
302 CAUSAS CELEBRES
= = Eº

to mismo con S. M. que ni le dirá, tre, que es decir mi sentimiento, y lo


aunque mas lo procure, todo lo que que me se representa por mas verosi
sabe, que hay mil menudencias que mil con las conjeturas que para ello
no se pueden escribir y harian mu tengo.
chas veces la sustancia del caso; ni Cuanto á lo primero, estando en
aun cuando se digan, tienen por escri buena razon, á mí no me parece lleva
to la vida que les da la viva voz que ánimo para ser don Sebastian, asi por
las hace parecer muy de otra manera no decir bien las señas del uno con
y hacer muy diferente juicio, fundán las del otro, que aunque en las mas
dome digo en esto que persuadí á V. convengan, segun lo que yo he oido,
en la pasada, que no obstante que en otras muy esenciales diferencian:
S. M. sin duda consultará allá á todo como porque parece cosa de risa decir
¿ de gente letrada y no letrada, que ha estado tantos años encubierto
iciese V. otro tanto acá, juntando á don Sebastian y al cabo de ellos no
sus buenas letras de alguno ó algunos topó otro mejor refugio que fray Mi
teólogos como consultores de un caso guel, ni otro mejor oficio que pastele
tan grave, que oyendo y viendo todo lo ro, ni otro mejor pueblo que Madrigal;
que V, sabe de este negocio podrán y lo principal, porque dado que fuera
mejor juzgar y decir su parecer, que vivo y de que de puro corrido del su
los que solo ven unos papeles muer ceso de la batalla se hubiera encubier
tos: y si esto no hace, licencia se da to al principio, y tenido por mejor ca
á que piense el mundo que es verdad recer por algun tiempo de su reino que
lo contenido en este discurso, que no pasar aquella vergüenza que en pocos
es mio solo, sino de muchos que le dias se pasara y olvidara; y ya que
tienen y muy bueno, y no faltará por queria recuperar su estado, ¿qué tenia
ventura quien lo publique ni aun otros mas que entrarse en su reino y mani
muchos que se adelanten mas en pen festarse en él y desde alli dar noticia
sar y hablar, de donde se podian se á nuestro rey, y en tanto que no podia
guir tales y tantos inconvenientes que dudar de la cristiandad de S.M. que al
no fuesen bastantes buenas trazas, punto que esto constára le hiciera en
ni quizás gruesos ejércitos á atajar trega del reino, y aun quizá de su pro
los: y pues Dios ha hecho tanta mer pia hija, sin que tuviera necesidad de
ced á estos reinos, que por la prision sacar una monja de su monasterio pa
de este hombre se pueda averiguar la ra casarse con ella, y ya que se temie
verdad del caso, y descargar la real ra del rey y cayera en su entendi
conciencia, si conviniere, sin venir á miento duda de lo que en él hiciera y
dar en estos inconvenientes, justo es con este temor se determinára á aguar
tomar todos los medios posibles para dar par a despues de sus dias, á qué
este fin, y para satisfacer al mundo propósito ó para qué se habia de venir
que es mas necesario de lo que yo sa á Madrigal pudiendo estar mas seguro,
bré decir. Y asi torno á suplicar á V. mas servido y regalado en mil casas de
mire muy bien lo que hace y no se ar— Portugal de las personas con quienes
roje, que le va el alma y la honra en dicen se ha declarado y le han de ayu
ello. dar á su tiempo? Pues dar por salida
Hasta aquí todo ha sido hablar de á todo esto el voto que dicen que tie
bajo de condicion si es Pedro ó Juan, ne hecho de no reinar ni entrar en su
porque aunque del no ser hombre bajo reino por espacio de veinte años, es
rece que hay claridad, y veo á hom mas para reir que para nada, porque
¿ muy doctos y cuerdos asegurarlo, no hubiera sacristan que no dijera que
y decir que no les sacará dello todo el tal voto no era válido, ó si lo era se
mundo, pero de quien sea detenida !lo conmutaria con mucha facilidad, y
mente no la podemos tener con reso sabiendo él esto como fué forzoso el sa
lucion los que miramos desde afuera, berlo, que aunque fray Miguel ha dicho
y aunque yo no querria arrojarme á lo públicamente que él se lo ha dicho,
que no tengo por muy cierto, entre no se puede decir que le contuviese
otras ignorancias que habré dicho, he la obligacion del voto y menos la devo
guardado la mayor parte para la pos cion de guardarlo, de quien andaba
EL FINCIDo REY DE PORTUGAL. - 303
adº -a a
e -

tras una mugercilla en Valladolid no serey, mas amigo de secreto que nunca
puede presumir tanta devocion, que se vió. Mas no dude V. de que nos ha
por ella solo se privase de un reino ende llevar muy pocos meses de ventaja
iero, y mas deseándolo tanto como ha en saber toda la verdad, porque no es
mostrado la esperiencia por la trama caso este para encubrirse, y como ello
que estaba urdida. se acierte ojalá nunca se sepa.
Mil disonancias y repugnancias tie No se canse V. en inquirir quién
ne esto de don Sebastian, y asi me sea el que hace esto, ó por qué vía se
queda muy poca, ó ninguna duda encaminan los papeles, sino tómelos
cuanto á este punto. Y, pues á ser como venidos del cielo, porque lo de
personage por lo dicho el preso, á lo mas no servirá sino de escandalizar el
que mas me inclino es á lo que parece pueblo, y de que yo me retire por mas
que lleva mas camino á que es don cosas que sepa dignas de ser adverti
Antonio. Lo primero porque ningu das, como le doy mi palabra, de que
no otro hay que pudiera dar en esto, estuve por hacerlo ahora, por haber sa
en quien mejor cayera que sepamos bido la diligencia que se ha hecho por
alte de Portugal: lo segundo, porque coger al que llevaba el papel, y si este
todo el tiempo que se dice que este no diera en cierta traza que hallé pa
hombre anda por acá, no se sabe de ra desmentir las espías, V. se quedara
don Antonio si vive ó muere, ó donde sin él por ahora, y aun quizá para
está; lo tercero porque ya que está siempre que con algun enfado de ver
aqui no se supiera por no haber teni diligencia tan de propósito y con de
nido ocasion, ni ha habido para inqui seo por otra parte de no dejar por esto
rirlo, tiempo ha habido para saberlo lo que para el bien comun tengo por
despues que anda este negocio, que tan necesario, estaba ya dando traza,
ha ya tres meses, y no es posible que como enviarle al rey, con el aviso de
habiéndose hecho tanta diligencia para que V. no daba lugar á ser por estos
saber cosas que eran ramos de este medios advertido de cosas que tanto
negocio, en solo el punto principal que importan.
es este, haya habido descuido. Y pues
esto no se ha de creer, y por otra par No fué esta la última carta que por
te no hay hallar rastro de don Anto igual misterioso conducto siguieron
nio, harto camino lleva que es este. recibiendo don Rodrigo Santillan y el
Lo cuarto, porque la edad y otras doctor Llanos.
muchas señas de don Antonio, vienen Ambos jueces seguian prendiendo
bien con las que dan de este los que le á cuantos les inspiraban la menor sos
han visto. pecha, pero cerciorados despues de
Lo quinto, porque la amistad de que no tenian que ver nada en la cau
don Antonio sabemos que era estre sa en que estaban entendiendo, se
chísima con fray Miguel y que esto le veian precisados á soltarlos.
tiene por acá y no habia tanto que Los portugueses, los estrangeros y
maravillarnos de que andando don los frailes que por su mala ventura se
Antonio, como anda, le viniese á bus acercaban á Medina ó á Madrigal eran
car y tratar cosas con él, y que el el objeto de sus pesquisas y rigores.
fraile le pusiese en contacto con la se Asi fueron presos y puestos al tor
ñora doña Ana y poco á poco se fuese mento uno que habia sido page de don
urdiendo esta tela, ó que desde atrás Antonio, y un fraile trinitario, de los
se trujese urdida por cartas, y esto le que únicamente se pudo averiguar que
trujese acá y el tomar el pulso á las el primero era un francés que habia
cosas del reino, y quizás á algunos tomado parte en la sublevacion de Za
personages de él para ver si hallaba ragoza en defensa de António Perez,
acogida en ellos; para lo cual y para fugado despues, habia sido bandolero
otras cosas no era mas que medio la en Cataluña, y el otro un pobre reli
señora doña Ana. Es os indicios sabe gioso que sin la obediencia de sus su
mos acá, los que hacen al caso V. los periores, especie de pasaporte de que
sabrá y juzgará y disimulará como usaban los frailes, iba á Zamora á ver
buen juez y tan discreto ministro del una hermana, pero ni el uno, ni el
304 - CAUSAs CELEBRES.
=es

otro habian oido en su vida hablar del muertos, adonde murieron, y qué edad
pastelero. tiene, dijo: que se llama, Gabriel de
El juez eclesiástico, para acabar de Espinosa, y luego, habiendo estado un
completar la causa que seguia á doña rato suspenso sobre la pregunta de
Ana de Austria, al vicario y á las mon quién es, y persuadiéndole el dicho
jas, tuvo necesidad de pasar á Medi juez apostólico á que diga verdad, ha
na á tomar declaracion á Gabriel de ¿ primero dicho el dicho Gabriel
Espinosa, con el objeto tambien de de Espinosa que borrasen su nombre de
ver al mismo tiempo si usando, como Gabriel de Espinosa porque no es su
podia por la clase de comision que te nombre Gabriel de Espinosa, dijo: que
nia del nuncio de S.S., de las censu no quiere decir su nombre, y habién
ras eclesiásticas y excomunion logra dole el dicho juez persuadido y agrava
ba hacerle decir la verdad, ó declarar do las censuras contra él para que diga
alguna cosa á las preguntas que contí la verdad de quién es y cómo se llama,
nuamente le habia hecho don Rodrigo respondió que no puede decir cómo
Santillan, y á las que siempre se ha se llama, porque tiene profesado de no
bia negado á responder: tanto era el decillo hasta que se muera, y el dicho
crédito que tenian en aquella época las señor juez apostólico le mandó al suso
ideas religiosas, que se creia que estas dicho, y dijo que en virtud de la facul
podian suplir y hacer mas que el tor tad apostólica que su merced tiene para
mento, á que parecia negarse hasta esta causa de que en esta parte usa, le
entonces el rey. alza el dicho juramento y promesa que
La declaracion que prestó Gabriel dice que tiene hecha, y le manda en
de Espinosa ante el juez eclesiástico, virtud de la dicha facultad apostólica
y que por cierto no arrojó de sí mas que debajo de incurrir en las censuras
luz que las que repetidamente habia que le están fulminadas hasta de ana
prestado delante de don Rodrigo San thema contra él y de nuevo perentorio
tillan, fué la siguiente (1): término, las fulminas y agrava y rea
grava contra él, le manda que diga
En la villa de Medina del Campo, quien es y cómo se llama y lo demas
dentro de la cárcel pública de esta di contenido en la dicha pregunta que le
cha villa á diez y siete dias del mes está hecha, y entendido por el susodi
de febrero del año de mil y quinien cho, y habiendo pasado otras muchas
tos y noventa \, cinco, el doctor Juan razones entre el susodicho y el dicho
de Llano de Valdés, juez apostóli juez apostólico por muy gran rato, res
co en esta causa, para mas averigua pondió y dijo: que lo oia, y que dice lo
cion de la verdad della, hizo parecer que dicho tiene y en ello se afirma y
ante sí personalmente á un hombre en que no quiere decir cuyo hijo és, ni
que está preso en la dicha cárcel que de donde son naturales sus padres, ni
se dijo llamar Gabriel de Espinosa, del si son muertos ni vivos; y luego dijo
cual fué recibido juramento en forma que su padre y su madre son muertos,
debida de derecho, y lo hizo bien y y que á su padre no le conoció, y que
cumplidamente so cargo, del cual pro á su madre sí; y que bien sabe quie
metió de decir verdad de lo que su nes eran su padre y madre, pero
piere y fuere ¿ y habiendo que no lo dice ni declara por lo que
jurado segun dicho es, fué por el di dicho y declarado tiene, y que es de
cho juez examinado en la forma si edad de 53 años poco mas ó menos y
guiente: - que no los tiene cumplidos, y esto res
Preguntado quién es, cómo se lla ponde á esta pregunta.
ma, de donde es natural, cuyo hijo es, Preguntado diga y declare la causa
y donde ha residido de veinte años á por que en las confesiones que se le
esta parte, cómo se llamaba su padre han tomado por el señor alcalde don
y su madre y de donde eran naturales, Rodrigo de Santillan ha dicho y decla
y si sabe donde residieron, y si son rado, que se llama Gabriel de Espi
nosa, y ahora niega no llamarse asi,
(1) Archivo general de Simancas.-Nego dijo: que la causa porque ha declarado
ciado de Estado, legajo 473, (1595). no llamarse Gabriel de Espinosa como
EL FINGIDO, REY DD PORTUGAL, 305
c====

en las demas confesiones lo ha hecho, Preguntado diga y declare si ha


ha sido por las eensuras que se le han estado alguna otra vez antes de la que
puesto y porque temiendo á Dios quiso dicho y declarado tiene en la pregunta
decir la verdad, y que la causa porque antes de esta, en la dicha villa de Ma
se llamó ante dicho señor alcalde Ga drigal, y que intento llevó cuando di
briel de Espinosa, fué porque á la sa ce que fué á la dicha villa con oficio
zon que le prendió el dicho alcalde de pastelero, dijo: que nunca ha es
usaba oficio de pastelero ó le habia tado otra ninguna vez en la dicha villa
usado, y en él se habia puesto aquel de Madrigal mas de la que dicho y de
nombre porque traia carta de exá clarado tiene, y que el intento que lle
men en que venia especificado aquel vó á la dicha villa, fué á ver si podia
nombre y porque si le fuese pregunta ganar de comer en ella en el dicho
do, condecendiese con la dicha carta oficio porque le habian dicho en la villa
de exámen y esto responde á esta pre de la Nava, á donde antes estuvo con
gunta. el dicho oficio, que alli podria ganar de
Preguntado diga, y declare que es comer en él, porque era buen lugar, y
la causa por que habiéndole pregunta que no tuvo otro intento ni mas causa
do debajo de juramento y de las cen que esta, y esto responde á esta pre
suras que le están espuestas, que diga gunta.
y declare su nombre y quien es, no lo Preguntado si en el tiempo que di
quiere decir; pues dice y confiesa que ce que estuvo en la dicha villa de Ma
por temor de ellas y del respeto que se drigal, trató particularmente con la di
debe á Dios Nuestro Señor y á su Igle cha doña Ana de Austria y con el di
sia, declaró no ser su nombre Gabriel cho fray Miguel de los Santos, diga que
de Espinosa y pues asimismo le está negocios trató con los susodichos, y
alzado el juramento y voto que dice cualquier de ellos, y con que otras
que hizo de la ¿ de no decirlo personas trató en el die monasterio,
en virtud de la facultad apostólica que dijo: que es verdad que algunas veces
para esta causa su merced tiene, dijo: trató este testigo con la dicha doña
que sin embargo de ello le parece á Ana de Austria hablándola á la grada
este confesante que no lo puede decir,del dicho monasterio en presencia del
por la causa y razon que dicha y decladicho fray Miguel de los Santos y de
rada tiene y esto responde á esta pre doña Luisa de Grado, monja del dicho
gunta. monasterio, y otras monjas que no se
Preguntado diga y declare si cono acuerda de su nombre y que lo que
ce á doña Ana de Austria, monja profe hablaba con ella era preguntar á este
sa del monasterio de Nuestra Señora testigo como le iba en el pueblo, y que
de Gracia la Real de la villa de Madri si ganaba de comer en su oficio, y
al, y á fray Miguel de los Santos, frai otras cosas á este propósito de poco
e profeso de la órden de San Agus momento, y que si le queria dar una
tin, natural del reino de Portugal, vi niña que él traia consigo, que se la
eario que ha sido del dicho monaste criaria y ¿s que con el dicho
rio de monjas de la villa de Madrigal, fray Miguel de los Santos trataba mas
y que tanto tiempo ha que los conoce, particularmente acudiendo á su celda
y por qué causa y razon, dijo: que co algunas veces, y que tampoco trataba
noce á la dicha doña Ana de Austria y con él cosas particulares que fuesen de
el dicho fray Miguel de los Santos des consideracion, y que no trató en el di
de el mes de junio del año próximo cho monasterio mas de con las susodi
pasado de noventa y cuatro, que es— chas, y esto responde á esta pregunta.
te confesante se fué á vivir á la dicha Preguntado diga y declare que fué la
villa de Madrigal con oficio de pastele causa porque la dicha doña Ana dijo á
ro, y que la causa porque los conosció, este confesante que le diese la dicha
fué porque le fueron á pedir que les niña, y que se la criaria no le conocien
hiciese pasteles y que los llevaba fia do, y asimismo diga que principio tu
dos algunos, y que yendo á cobrar el vo este confesante para conocer á la
dinero los conosció y esto responde á dicha doña Ana y tratar con ella, dijo:
esta pregunta. que la causa perº dicha doña Ana
306 CAUSAS CELETRES.

le pidió la dicha niña, fué por ha er nor tal, dijo: que los dichos doña Ana
le parecido bien por ser bonita y her de Austria y fray Migue de los Santos
mosa, y que el principio del conosci tenian á este confesante por el dicho se
miento que tuvo con ella, fué que de ñor rey don Sebastian, y que visto que
biéndole dinero de pasteles doña Luisa le querian tratar y tener en esa reputa
de Grado, monja del dicho monasterio, cion que este confesante les declaró que
que servia á la dicha doña Ana de Aus no lo hacian bien ni acertaban en ello
tria, y yéndoselos á pedir este confe ni era cosa que sepº hacer, porque
sante, le dió una cruz de madera con era ser traidores al rey nuestro señor,
relicarios en ella para que la diese á la de que en ningun reino propio se pu
dicha doña Ana, y la dicha doña Luisa diese llamar á otro ninguno rey, pena
de Grado le dijo á este confesante que de ser traidores, y que con esto y una
la dicha doña Ana le queria hablar, y carta que envió el provincial de los
estando un dia en la grada de dicho agustinos á doña Ana de Austria di
monasterio, la dicha doña Ana con el ciéndole que la visitaba un pastelero
dicho fray Miguel y, este confesante, que estaba en aquel lugar, y con la
fuera en el patio el dicho fray Miguel le opinion que vió que los susodichos te
llamó á este confesante, diciéndole que nian de este confesante, procuró de
la dicha doña Ana de Austria le queria irse de la dicha villa como lo hizo sin
hablar, y asi entró en el dicho locuto consentir en lo susodicho por no ofen
rio y la habló en presencia del dicho der al rey nuestro señor, y esto res
fray Miguel de los Santos, y esto res ponde á esta pregunta.
ponde á esta pregunta. Preguntado diga , y declare si es
Preguntado diga y declare á donde verdad que este confesante es el rey
vió la dicha doña Ana á la dicha niña don Sebastian, por quien los dichos
y quien se la llevó ó por cuya órden y doña Ana de Austria y fray Miguel de
mandado, pues dice este confesante los Santos le tenian, dijo: que no es el
e no habia hablado antes á la dicha rey don Sebastian, y esto responde á
oña Ana, dijo que la mandadera del esta pregunta.
dicho monasterio que iba por los pas Preguntado diga y declare si sabe
teles, le dijo á doña Ana que tenia una ó ha entendido qué motivo tuvieron la
niña este confesante muy linda como dicha doña Ana y el dicho fray Miguel
un oro, y la mandó la dicha doña Ana para tener á este confesante por el
que la llevasen allá, y asi la llevó, y dicho señor rey don Sebastian, no lo
otras veces la enviaba este confesante siendo como dice que no lo es, dijo:
con su criada, y esto es lo que sabe y que el motivo que entiende que tuvie
responde á esta pregunta. ron los dichos ¿ Ana y fray Miguel
Preguntado diga y declare si es fué las señas que el dicho fray Miguel
verdad que en los tratos que este con dijo y reconosció que tenia este con
fesante tuvo con la dicha doña Ana de fesante, por las cuales dijo y afirmó
Austria y con el dicho fray Miguel de ¿ era él, y lo mesmo dijo la dicha
los Santos, este confesante les dijo y oña Ana á este confesante que le ha
dió á entender que era el rey don Se bian dado muchos dias habia señas del
bastian, que andaba disfrazado algunos dicho señor rey don Sebastian, y que
años habia, y que no se podia declarar eran las que este confesante tenia, á
por cierto voto que tenia hecho hasta lo cual este confesante les dijo que se
cumplir cierta penitencia que tenia engañaban y que no era asi, y respon
prometido de hacer, dijo: que lo niega, dió la dicha doña Ana que mirase bien
y que nunca tal pasó, y esto responde lo que decia, que seis años habia que
á esta pregunta. . estaba esperando al dicho rey don Se
Preguntado diga y declare si es bastian, y que para ello habia hecho
verdad que la dicha doña Ana de Aus muchas oraciones y promesas y que
tria y el dicho fray Miguel tenian á es en el año pasado de noventa y cuatro
te confesante por el señor rey don Se le habia de esperar, y que si hasta el
bastian, y como á tal le trataban y co dia de San Miguel de dicho año no
municaban, y este confesante consen venia , que no le habia de esperar
tia en el dicho trato de que le luviesen mas, y que por haber venido en aque
EL FINGID0 REY DE PORTUG AL, 307
====

lla coyuntura, y por las dichas señas haya tratado ni comunicado estos ne
se afirmó mas, y esto es lo que sabe y gocios mas de entre todos tres y doña
responde á esta pregunta. Luisa de Grado, monja del dicho mo
Preguntado si es verdad que por nasterio, y esto responde á esta pre
tener la dicha doña Ana y el dicho gunta.
fray Miguel á este confesante por el Preguntado, diga y declare si es
dicho señor rey don Sebastian trataron verdad que este confesante se vió con
entre la dicha doña Ana y este con la dicha doña Ana á solas dentro del
fesante de casarse y se dieron palabra dicho monasterio ó fuera dél en parte
de casamiento, y sí es verdad que en sospechosa, diga á donde y cuando, y
confirmacion de esto, este confesante quien estaba presente, dijo: que nunca
hizo una cédula á la dicha doña Ana se vió con la dicha doña Ana en otra
escripta de su mano y firmada de su ninguna parte mas de en la grada de
nombre, y se la dió en la grada del di dicho monasterio, ni tal le pasó nunca
cho monasterio, el dia que se despidió por pensamiento, ni á la dicha doña
de ella cuando salió de esta villa de Ana tampoco, ni habia persona que tal
Madrigal en presencia de fray Miguel pueda decir ni imaginar en ninguna
de los Santos y de doña Luisa de Gra parte, y esto responde.
do ó de alguno de ellos, dijo: que lo Preguntado si es verdad que es
niega y que nunca tal pasó, y esto res tando un dia este confesante en el
ponde á esta pregunta. aposento de fray Miguel de los Santos
Preguntado si es verdad que la di estando en la cama el dicho fray Mi
cha cédula de promesa de casamiento uel indispuesto, paseándose este con
que este confesante hizo á la dicha do esante por el dicho aposento, le dijo:
ña Ana, se la hizo en voz y nombre del Pocos sacerdotes hay que tengan en
rey don Sebastian diciendo en ella: Yo su presencia un º como vuestra pa
don Sebastian por la gracia de Dios ternidad lo tiene, dijo, que lo niega y
rey de Portugal, etc. prosiguiendo ade que nunca tal pasó y esto responde.
lante con las palabras de la dicha pro Preguntado si es verdad que cuan
mesa, y firmó al pie de ella, Yo el rey, do este confesante se fué de la dicha
dijo: que lo niega y que nunca tal pa villa de Madrigal fué concierto entre la
só, y esto responde á esta pregunta. dicha doña Ana y el dicho fray Miguel
Preguntado, diga, y declare qué y este confesante, que se fuese de la
tratos y conciertos habia entre este dicha villa, y que dentro de pocos dias
confesante y el dicho fray Miguel de volviese á ella en hábito diferente,
los Santos, temiéndole como le tenia disfrazado, en compañía de otras per
por el dicho señor rey don Sebastian, sonas, de manera que no fuesen cono
que intento y fin llevaba de querelle cidas en el dicho lugar, y para el ca
acer rey, y con qué otras personas lo mino le mandó dar la dicha doña Ana,
trataban y comunicaban y se corres cien ducados, los cuales le dió el dicho
pondian de estos reinos ó fuera de ellos fray Miguel de los Santos, y con ello le
y si de estos tratos sabia algo ó enten dieron otras piezas de oro y plata, di
dia la dicha doña Ana, diga y declare ga y declare qué intento llevaban en el
con que otras personas trataron los di dicho concierto, y si era para sacar á la
chos negocios, y quienes eran y de dicha doña Ana del monasterio, ó que
donde, dijo: que este confesante no sa concierto habia entre ellos, dijo: que no
be de ningunos tratos que hubiese en hizo este confesante ningun concierto
tre él ni el dicho fray Miguel de los ni pensaba volver mas á la dicha villa
Santos, porque como dicho tiene los de Madrigal, y que es verdad que le
dichos doña Ana de Austria y fray Mi dieron dineros, pero que no se acuer
guel de los Santos afirmaron como di da que tantos, y algunas piezas de pla
cho tiene que este confesante era el di ta, y esto responde, y que lo demas
cho rey don Sebastian, y que el inten niega.
to que tuvieron, este confesante no lo reguntado, diga y , declare si es
sabe que ellos lo dirán y que no sabe ni verdad que despues de ido este confe
ha entendido que con ninguna persona sante de la dicha villa de Madrigal, se
de estos reinos ni fuera de ellos, se fué á la de Valladolid y paró en casa de
308 CAUSAS CELEBRES.
=e

Gabriel Rodriguez y que tiene casa de tores poco ó nada, á pesar del celo
posada junto á donde se representan y de las diligencias de ambos jueces,
las comedias, y de allí envió á la dicha se adelantaba en la prosecucion de es
villa de Madrigal con cartas para la di ta cauSa.
cha doña Ana y el dicho fray Miguel á Al fin, contestando Felipe II á las
el dicho Gabriel Rodriguez, y al tiem reiteradas peticiones de , los jueces,
po de la partida del dicho Gabriel Ro les dió órden para que pudiesen poner
driguez, este confesante le llamó y le en el tormento á º Miguel de los
dijo que dijese á la dicha doña Ana Santos y á Gabriel de Espinosa.
que era vecino de Burgos y que en Puestos de acuerdo ambos jueces,
años atrás habia visto á este con dispuso don Rodrigo Santillan la tras
fesante en su casa en otro trage y lacion del pastelero á Madrigal, y el
hábito diferente acompañándole cier doctor Llanos se preparó para dar tor
tos caballeros que venian con él, los mento al fraile, para lo cual habia
cuales le servian á la mesa descubier hecho venir dos verdugos de Valla
tos y con respeto, y que despues que dolid.
este confesante habia comido, se iban Ordenó y dispuso el potro en una
ellos á comer, para dar á entender á sala de la cárcel de Madrigal; hizo el
la dicha doña Ana que era el que pen doctor subir á ella á fray Miguel de
saba, ó persona de mucha autoridad, los Santos, el que se hallaba suma
dijo: que es verdad que este confesan mente abatido, pálido y flaco, efecto ya
te dijo al dicho Gabriel Rodriguez al de la prision, ya de las enfermedades
tiempo que la pregunta dice, que si y los achaques propios de su edad. Le
le preguntasen de donde iba, respon amonestó con palabras suaves á que
diese que iba de Burgos y que alli que como ministro de Dios no aguardase
daba en su casa á donde otra vez á la terrible prueba del tormento que
habia posado con otros caballeros le preparaba para que confesase la ver
amigos suyos que se encontraron en dad, porque era ya tiempo de termi
el camino, y que alli le servian cria nar aquel negocio, y al mismo tiempo
dos suyos, y esto fué lo que dijo á previniéndole que si en el tormento
el dicho Gabriel Rodriguez y no otra moria, ó se le quebraba algun miem
cosa, y no con ningun intento de los bro, no seria culpa suya, sino que de
que dice esta pregunta, y esto res beria imputárselo á su obstinacion y
ponde á ella. terquedad en el callar.
Fuele apercibido por el dicho se Fray Miguel volvió á repetirle que
for juez apostólico que diga la verdad nada mas tenia que decir: que lo que
de lo que ha sido preguntado, pues en diversas ocasiones habia declara
todo ello le está probado, con aper do era la verdad, que podia morir en
cibimiento que se proveerá justicia; y el tormento, porque ya su vida no
entendido respondió y dijo: que no debia ser naturalmente muy larga, pe
sabe mas de lo que lido y declarado ro que ni el dolor ni el miedo le harian
tiene en este su dicho y declaracion confesar mas que lo que habia dicho,
que lleva diez hojas de papel con es que era la verdad.
to en que va su firma, lo cual es Entonces el juez eclesiástico hi
la verdad y lo que sabe de lo que zo una señal á los verdugos, los cua
ha sido preguntado só cargo del jura les se apoderaron del infeliz religioso,
mento, "¿ fecho tiene y en ello se que se hallaba temblando y estreme
ratificó habiéndole sido leida en per cido todo; le arrancaron sus hábitos,
sencia del dicho señor juez apostóli lo pusieron desnudo, y lo amarraron
co, y lo firmó juntamente con el dicho al potro. Ligáronle cuerdas á las pier
juez apostólico. Va testado, dixo dix, nas y á los brazos, y antes de apre
Anna; que no valga ni dañe.—El doc tarle le volvió el juez eclesiástico á re
tor Joan de Llanos de Valdés.—Yo el querir la contestacion á las preguntas
preso.—Pasó ante mí.—Francisco de que le tenia hechas, y el religioso vol
Santander, Notario apóstolico y real. vióá repetir que nada tenia que aña
dir á sus anteriores declaraciones por
- Como habrán visto nuestros lec ser la verdad.
EL FINGlDO REY DE PORTUGAL. 309
-= =-=:

Apretaron los verdugos las cuer quier otro reino aguardando el éxito.
das; penetraron estas en sus enflaque Damos literalmente trascrita esta
cidas manos y piernas, é hinchando importante declaracion, que fué una
con la presion las venas corria la san de las piezas principales de conviccion
gre en abundancia por el potro, pe de esta causa (1).
ro el fraile con un valor y una cons
tancia dignos solo de un jóven, y de Que el intento y motivo que tuvo
un jóven de constitucion robusta, pade en aquel negocio, fué tomar voz de
cia, únicamente esclamaba alguna que que Gabriel de Espinosa era el rey don
otra vez diciendo: «Dios mio, si he di Sebastian despues de persuadídolo
cho la verdad; ¿por qué se me trata al reino de Portugal y levantádole,
con tanta bárbarie? Moriré, pero nada avisar á don Antonio que acudiese y
mas puedo decir.» hacerle rey de Portugal y que Espino
El mismo doctor Llanos, parecia sa se valiese por su pico, ó don Anto
conmoverse á la vista de un anciano nio viese lo que queria hacer dél con
débil, desafiando un inmenso dolor; sin que no le matase.
embargo, queria concluir con aquella Que esto habia de ser despues de
causa que se iba tanto tiempo dilatan los dias de S. M. y que para este efec
do; necesitaba á toda costa una con to por principio de julio de 94 poco
fesion; y asi es que á pesar de que pa despues que vino Espinosa á Madrigal
recia que fray Miguel iba á espirar, escribió fray Miguel á don Antonio di
mandó redoblar el tormento y apre ciéndole que importaba mucho se vie
tar los cordeles con mas fuerza. se con él viniendo áMadrigal disfraza
Ya entonces anublados los ojos, do, y que si no pudiese se lo avisase
agitada violentamente la respiracion, para que le escribiese un negocio de
apagada la voz, sintió un horrible do mucha importancia, y esta carta le en
lor fray Miguel, y perdiendo sus fuer caminó á Lisboa en un pliego dirigido
zas creyó preferible la muerte á los á fray Alvarez de Jesus, procurador de
terribles padecimientos con que le afli la órden de San Agustin para que le
gian. Pidió pues, casi moribundo que diese á Manuel de Tavares, mercader,
aflojasen las cuerdas, y que él diria vecino de Lisboa, el cual se la encami
cuanto supiese. Mandó entonces el nó á don Antonio.
doctor Llanos que le bajasen del po Que tras esto, á 20 ó 21 de agosto
tro; empero se hallaba incapaz de po vino á Madrigal el dicho don Antonio,
der hablar ni pronunciar una sola pa disfrazado con un vestido de mezcla
labra. que tiraba á leonado con una capa
Fué pues, preciso reanimar sus manchega, y posó en un meson de
abatidas y estenuadas fuerzas con un aquella villa que no sabe cuyo era, y
cordial, y algo repuesto en sí, el doc el mismo dia en la noche andándose
tor Llanos, volviendo á repetir la ame paseando fray Miguel fuera de la puer
naza del tormento que veia que al fin ta del patio del monasterio, llegó el di
habia producido tan buen efecto, exi cho don Antonio solo con otro hombre
gió de él su confesion, en la que de que es fraile francisco, deudo de don
claró que su objeto era, por medio del Antonio por parte de su madre, que se
fingimiento de que Espinosa era el llama fray Diego Cárlos, que traia hábi
rey don Sebastian de Portugal, apro to de seglar, y luego se desarrebozó
vechando la gran semejanza que con don Antonio y se descubrió, y dió á co
aquel difunto rey tenia el pastelero, nocer á fray Miguel, diciéndole: A esta
suscitar á la muerte de Felipe II una hora se saltean los amigos, y se abra
revolucion en aquel pais con objeto de zaron, y don Antonio le dijo que venia
colocar en el trono á don Antonio, á verle por una carta suya ¿ habia
prior de Crato, deshaciéndose si tenia recibido en Galicia en el lugar del
efecto su combinacion política por Ferrol, que le encaminó Manuel de
cualquier medio del pastelero, y si es Tavares, y luego se salieron al campo
ta se frustraba aventurando la persona
de éste, mientras don Antonio perma (1), Archivo de Simancas.—Negociado da
necia tranquilo en Francia, ó en cual Estado, legajo 173. (1595). - -
30 CAUSAS CELEBRES.
==e

donde estuvieron paseando hasta gran los que venian, con él, y dentro de
parte de la noche, y fray Miguel dijo á quince dias recibió una carta su ya fray
don Antonio que tenia alli un hombre Miguel en que le avisaba como habia
con algunas señas del rey don Sebas llegado bueno á Lisboa, y que queda
tian, y le parecia que tenia sagacidad ba en la dicha casa encubierto, y que
y prudencia para saber fingir que era le avisase lo que habia en este negocio,
el dicho rey y tenia tratado con él que que él por allá hacia lo que podia, ha
dijese que lo era y que para calificar blando á algunos caballeros portugue
mas el negocio trataria de casarle con ses sus amigos, y que muy presto vol
doña Ana á quien tenia persuadida veria por acá, á que respondió el dicho
¿ Espinosa era el dicho rey, y que fray Miguel con cubierta al dicho Ma
on Antonio, despues de introducido á nuel de Tavares diciéndole lo mucho
Espinosa, y persuadido á los del reino que se holgaba de que estuviese bueno
de Portugal que era don Sebastian, y que en los negocios no habia nove
podria entrar en el reino con sus ami dad, y que le quedaba aguardando, y
gos y valedores, y quedarse por rey que tras esto no tuvo mas carta suya,
echando á Espinosa. porque luego sucedió la prision en que
Que á esto le respondió don Anto está.
nio que aunque el negocio iba bien en Que don Antonio le dijo que dos
caminado, le parecia dificultoso, pero meses antes que llegase á aquella villa
que el tiempo lo podria disponer y fa habia venido de Inglaterra en un pa
cilitar, y que él se holgaba mucho de sage inglés, y desembarcado en el
ello y ayudaría tambien por su parte y puerto de Vigo cinco leguas de Tuy y
diría que habia visto al dicho don Se raya de Portugal, viniendo con él los
bastian vivo en aquella villa, tras lo dichos fray Cárlos Acevedo y Diego Bo
cual se apartaron yéndose don Antonio tello y un fraile dominico mudado el
á su posada con los que le acompa hábito, que no se acuerda de su nom
ñaban. -
bre, y que habia hecho este viage por
Que otro dia á las dos, despues de ver á sus amigos y socorrerse, porque
medio dia, don Antonio fué á verá fray allá pasaba mucha necesidad, y de alli
Miguel á su celda trayendo consigo á pasó á Portugal á la Beyra, donde se
fray Diego Cárlos y á Antonio de Ace entretuvo dos meses por casas de clé
vedo natural de Lisboa, que es hombre rigos y abades sus amigos y conocedo
mediano de cuerpo, blanco de rostro, y res, y de allí se vino á Madrigal porque
la barba algo castaña, de edad de cua la carta de fray Miguel le alcanzó en
renta años, y estuvo con fray Miguel Galicia, y que las personas que le pro
como una hora, y trató del mismo ne veian y socorrian, eran Manuel de Ta
gocio en presencia de los que venian vares y otro mercader de Lisboa, lla
con él por haberlo él tratado ya con mado Francisco de Fonseca y otros mer
ellos, los cuales mostraban holgarse de caderes de Oporto, que no dijo sus
ello y decian que tambien ayudarian nombres.
al negocio y afirmarian que era vivo el Que no supo mas de don Antonio
rey don Sebastian y le habian visto ni lo sabe por estar preso, pero que el
bueno en Madrigal. - dicho Tavares lo sabrá, pues tiene or
Que don Antonio vió á Espinosa dinaria correspondencia con él.
sin que lo entendiese, y dijo á fray Que por el mes de julio del año pa
Miguel que aunque las señas que tenía sado de 94, vino á Madrigal un portu
no se parecian mucho á las de don Se gués que se llama Francisco Gomez,
bastian, se juntarian otras cosas de in criado del conde de Redondo que le
dustria con que tendria buen suceso el sirve en su casa y ha estado en Madrid
negocio, y con esto se acabó esta pláti á negocios suyos, y habló con fray Mi
ca y tras ella dijo el dicho don Antonio guel y le dijo que venia de parte de al
á fray Miguel que oro dia de mañana gunos caballeros portugueses á saber:
se partiria para Lisboa derecho donde si estaba alli el rey don Sebastian y
posaria en casa de Manuel de Tavares que queria velle para dalle las señas
y alli le podria avisar fray Miguel de lo y relacion de lo que en ello habia y
que pasase, y as se fué á Lisboa con habiendo visto á Espinosa el dicho Go
EL FINGID0 REY DE PORTUGAL. 3.

mez, dijo á fray Miguel que estaba muy «¡Ah! si el fraile nada hubiera di
contento de ello, y se fué al parecer de cho, no fueran bastante todos los tor
fray Miguel muy persuadido que era el mentos del mundo para hacerme decir
rey don Sebastian, Espinosa, y que no mas de lo que he dicho.»
le trajo cartas de nadie el dicho Fran Hizo su confesion casi en todo pa
cisco Gomez por el riesgo del camino. recida á la dada por fray Miguel de
los Santos, escepto en el punto de la
Arrancada por medio del tormento intencion de asesinarle y de la venida
la declaracion que acaban de ver de don Antonio, prior de Crato, de
nuestros lectores al vicario fray Mi la cual él nunca habia tenido la menor.
guel de los Santos, mandaron los jue noticia.
ces retirarle á la cárcel para que se cu Faltaba, sin embargo, á los jueces
rase de los padecimientos del cruelísi el aclarar el punto relativo á su naci
mo tormento que habia sufrido. miento, y á esto contestó lo que habia
Despues de haber dado tormento al dicho en sus anteriores declaraciones.
religioso hizo traer don Rodrigo Santi Insistieron los jueces; volvieron á ame
llan y el doctor Llanos á Gabriel de Es nazarle con el tormento; pero él les
¿ al mismo sitio á donde se a ca repitió entonces resueltamente que so
aba de atormentar á fray Miguel de bre aquel punto se dejaria matar pri
los Santos. Amonestáronle que si no mero que declarar ni una palabra mas.
confesaba inmediatamente cuanto se le Era este un punto muy secundario
habia tantas veces preguntado se le iba para los jueces, que lo que se proponian
á poner á cuestion de tormento, inti era la averiguacion del asunto princi
mándole de que si en él muriese ó perpal de la conspiracion contra el rey,
diese algun miembro sería culpa suya y el proyecto de apoderarse del Portu
y no de sus jueces; gal. Tenian, pues, todo lo necesario
Afectóse aquel hombre, hasta en para poder pronunciar la sentencia,
tonces tranquilo y sereno, y con ade asi no insistieron sobre el secreto de
man noble y magestuoso, reconvino á nacimiento de Espinosa, ó bien porque
sus jueces porque se escedian de sus por esta razon no lo creian necesario,
facultades, no creyendo posible que el ó porque en la actitud firme y resuel
rey mandase darle tormento para ave ta del pastelero vieron que iban á per
riguar lo que tan fácil le era sin mas der el tiempo y á esponerse á que pe
que mandar á algunas de las personas reciese en el tormento un hombre á
principales que estaban á su alrededor quien convenia al rey presentar como
en la córte. º un terrible escarmiento.
Ni el tono, ni la dignidad con que Los jueces civil y eclesiástico con
les hablaba Espinosa contuvo y arre la declaracion de fray Miguel de los
dró á los jueces, que se hallaban fir Santos y la de Espinosa, á quienes se
mes y seguros con la órden que habian les habia hecho firmar á pesar del mal
recibido de Felipe lI, y que tanto ha estado en que, particularmente al reli
bian solicitado, para darle tormento. gioso habia dejado el tormento, y la
No escucharon sus protestas y re de Espinosa en la misma forma que
convenciones. Los verdugos pusieron lo habia hecho en las anteriores, es de
la mano sobre aquel hombre, y á pesar cir, sin mas nombre que yo el preso,
de su afectada magestad le arrancaron pasaron á ver á doña Ana de Austria,
las ropas y colocaron en el potro, co la que se hallaba estrechamente re
menzando á apretar los cordeles. cluida en su celda, con el objeto de
Aquel hombre, jóven todavía rela desengañarla y hacerla ver la trama
tivamente á fray Miguel, no resistió en que aquellos dos impostores ha
ni las primeras vueltas. Apenas sin bian logrado enredarla.
tió penetrar los cordeles en sus carnes, Encontraron á la pobre monja siem
cuando pidió que le soltasen ofrecien pre triste y abatida; leyéronla las dos
do decir cuanto sabia. declaraciones; la enseñaron las firmas
Mandaron entonces los jueces ba de los reos; pero era tal el fanatismo que
jarle del potro, y esclamando con un aun conservaba aquella buena señora,
doloroso suspiro: que creyó que todo aquello era un ar
312 CAUSAS CELEl tE8.
==e

did y una trama de los jueces, y asi se contra ellos y las penas á que creian
lo manifestó; rechazando estos eon no deberlos condenar, para que el rey
ble indignacion aquella acusacion, asi modificase estas sentencias del modo
como la idea que espresaba la misma que mejor fuese su voluntad.
señora de que aquellas declaraciones El documento en que don Rodrigo
pudieran ser efecto del dolor y arran Santillan consultó á S.M. las senten
cadas por la terrible coaccion del tor cias es un cuadro en miniatura de
mento, no pudiendo creer aquello de todos los procedimientos y resultado
un hombre tan santo y tan virtuoso de la causa.
como fray Miguel de los Santos. Este documento ha sido copiado de
Hiciéronla ver los jueces que ca su original (1). -

balmente aquel hombre que siempre


tenia los nombres de Dios y de los Relacion de los presos principales y de
santos en sus labios, y que aparenta la culpa contra ellos resulta en
ba una austera virtud, era el causante la causa del supuesto don Sebastian
de aquella trama, debiendo de dar mil de Portugal.
gracias á la Providencia de que con
tiempo se hubiera descubierto su crí Culpa de Gabriel de Espinosa.
men, porque de lo contrario se hubie
ra visto unida á un hombre vil y bajo, Contra Gabriel de Espinosa está
perdido para siempre el honor, y man probado y confiesa, que persuadido de
chada su reputacion. fray Miguel de los Santos, se fingió ser
Doña Ana, á pesar de la ceguedad el rey don Sebastian que andaba encu
con que miraba á su confesor, y al bierto peregrinando por un voto que
que hasta entonces habia creido ser el habia hecho despues de la batalla de
rey don Sebastian, no pudo en presen Africa, y esto con intento de hacerse
cia de los documentos que leia, en vis rey de Portugal, queriendo persuadirá
ta de las reflexiones de los jueces, y el los naturales de aquel reino que lo era,
recelo que aquellos procedimientos ya con la autoridad de fray Miguel y con
habian comenzado á levantar en su algunas señales corporales, que dicen
corazon, dejar de conocer el terrible tiene Espinosa que son semejantes á
abismo en que habia caido. las que tenia el rey don Sebastian, y
Conoció entonces que querian per con los avisos y advertencias que fray
derla, se le representó en su imagina Miguel le dió y le habia de dar de co
cion lo que diria el rey, lo que diria sas particulares y secretas, que le ha
el mundo cuando supiese el modo con bian pasado con el rey don Sebastian
que ella se habia conducido y la parte siendo predicador de su madre la se
que habia tomado en aquella vil intri ñora reina doña Catalina, y provin
ga y negra conspiracion. cial que lo fué dos veces de la pro
Veia perdida su reputacion, man vincia de Portugal de la órden de San
chado de una manera irreparable su Agustin; y para autorizar mas esto y
honor; y en el esceso de su dolor y de que cobrase mas crédito y opinion el
su vergüenza no encontraba consuelo negocio é invencion que llevaban, tra
á pesar de las palabras afectuosas que taron de hacerlo creer á doña Ana de
le dirigian sus jueces, los que deján Austria, monja profesa del monasterio
dola entregada á sus tristes reflexio de Madrigal, y habiéndola persuadi
nes, dieron parte al rey Felipe II de do á que Gabriel de Espinosa era el
los importantes descubrimientos que rey don Sebastian, la persuadieron á
al fin acababan de conseguir. que se desposase con él y que seria
Obtenidas ya, aunque por el medio reina de Portugal, y asi se dieron pa
del tormento que constituia prueba labra de casamiento doña Ana de Aus
en la bárbara jurisprudencia de aque tria y Gabriel de Espinosa que fingia
llos tiempos, las confesiones de fray ser el rey don Sebastian y le hizo cé
Miguel de los Santos y de Gabriel de dula á doña Ana de ello, escrita de su
Espinosa, cada cual de los jueces con
sultó con el rey Felipe II el tanto de (1), Archivo de Simancas.—Negociado de
culpa que en los procesos resultaba Estado, legajo 173. (1595).
EL FINGID0 REY DE PORTUGAL, 313
-

mano, en que decia las palabras si ta causa hecho: fallo que debo conde
guientes: «Yo don Sebastian por la gra nar y condeno al dicho Gabriel de Es
cia de Dios rey de Portugal, etc. Por la pinosa á que de la cárcel donde está
presente me otorgo desde luego por es preso sea sacado puesto en un seron y
poso y marido de la serenísima doña sea arrastrado en la forma acostum
Ana de Austria, hija del serenísimo brada por las calles públicas acostum
infante don Juan de Austria, que sea bradas hasta llegará la plaza donde en
en gloria, por cuanto tengo para ello una horca, que para este efecto será fe
dispensacion de dos sumos pontífices.» cha, sea ahorcado hasta que natural
Y la firma decia: «Yo el rey.» Y hecha mente muera, y quitado de la dicha
esta diligencia, el fray Miguel lo escri horca, sea descuartizado y puesto en
bió á las personas qne declara en su cuartos por los caminos que por mí
confesion, y entre ellas al duque de fueren señalados, y la cabeza sea pues
Arco y conde de Redondo y á don Ro ta en una jaula de hierro y en un palo
drigo de Alencastro, y todos les res en el lugar que por mí fuere señalado.
pondieron que se holgaban mucho de Y por esta mi sentencia, etc.
saber quc fuese vivo el rey don Sebas
tian y que estuviese en Madrigal y Cabeza del pregon.
desposado con doña Ana de Austria, y
que á su tiempo estarian apercibidos Esta es la justicia que manda hacer
para servir á su rey como eran obli Su Magestad y don Rodrigo de San
gados y el duque de Arco y conde de tillan en su nombre á este hombre por
Redondo enviaron á la villa de Madri traidor al Rey Nuestro Señor, y ha
gal, á un Francisco Gomez criado del berse fingido persona real siendo hom
conde de Redondo que es muy conoci bre bajo y embustero
do y estimado en su casa, para que márgen enmendó el rey Feli
hablase á fray Miguel y se informase pe II de su letra el Su Magestad po
de todo, y viese al que decia era el niendo en su lugar el Rey NUESTRo SE
rey don Sebastian, el cual lo hizo asi ÑoR, y abajo SC MAGESTAD, diciendo: Es
y vido á Espinosa; y habiéndole fray to se trueque que viene mejor).
Miguel avisado que estuviese apercibi
do y compuesto porque le venian á Culpa de Inés Cid, que es el ama.
ver de º de parte de los dichos
duque y conde, y él lo hizo asi. Y el Inés Cid andaba en compañía de
Francisco Gomez fué muy contento de Gabriel de Espinosa de tres años á es—
haberle visto y muy enterado y satis ta parte vagando por diversos lugares
fecho de que Espinosa era el rey don y amancebada con él, fingiendo que le
Sebastian y se hicieron otras algunas servia de ama y le criaba una niña que
diligencias, y estaba concertado de era de ¿e de Espinosa y de una
que se habian de hacer muchas mas muger muy principal, siendo como es
que no se hicieron por haber sido pre la niña hija de Inés Cid y de Espinosa,
so Espinosa, como consta de su confe como está bastantemente probado y
sion y de la de fray Miguel, y de las verificado por sus confesiones y otros
averiguaciones que sobre ello se han indicios, y aunque en el delito princi
hecho, y presupuesto esto y que el pal de Espinosa, no se averigua que
delito que cometió Espinosa fué trai
Inés Cid haya tenido culpa, está averi
cion y crímen lesse majestatis in pri
guado que cooperó y ayudó en algunas
mentiras é invenciones que se hicieron
mo cápite, la pena y forma de ella pa
rece que con vendria fuese como se y dijeron en razon de dar á entender
sigue: Espinosa y fingir que era un personage
que por ciertos respetos andaba encu
Sentencia de Espinosa. bierto con oficio de pastelero.
En el pleito que es entre el fis Sentencia de Inés Cid.
cal de S. M. actor acusante, y Gabriel
de Espinosa reo acusado, por la culpa Fallo que atenta la culpa que resul
que contra él resulta del proceso en es ta contra la dicha lnés Cid que la debo
40
34 CAUSAS CELEBRES.
=-:

de condenar y condeno en doscientos todo el tiempo que estuvo en Madrigal


azotes y diez años de destierro del rei Espinosa no habia estado aquí Bas
no de Castilla y Portugal, sopena que Nieto, y que habia venido á Madrid el
si los quebrantare muera por ello. Y dia que don Rodrigo Santillan llegó á
por esta mi sentencia, etc. Madrigal, y en las confesiones lo dicen
asi todos, y asi paresce que se le pue
Cabeza del pregon. de dar sentencia absolutoria de la ins
tancia de este juicio en la forma ordi
Esta es la justicia, etc. á esta mu naria, para que si en algun tiempo pa
ger por haber consentido y ayudado á resciere culpado en estos negocios se
algunos embustes y mentiras de Ga proceda contra él por todo rigor de de
briel de Espinosa, etc. recho.

Culpa de Juan Roderos. Culpa del licenciado Mendez, médico.


Juan de Roderos era criado de do El licenciado Mendez, médico, fué
ña Ana y de fray Miguel, y aunque no preso por ser portugués y haberle trai
supo la maraña ni lo sustancial y prin. do á esta villa º Miguel de los San
cipal del negocio, empero supo como tos, pero en todas las averiguaciones y
fray Miguel decia que Espinosa era el diligencias que se han hecho, le discul
rey don Sebastian y supo de los rega pan todos, afirmando que en público y
los que doña Ana hacia á Espinosa y en secreto le vieron murmurar de los
como decia Espinosa que habia de ha tratos y secretos que traian fray Mi
cer sumo pontífice á fray Miguel y sen guel y doña Ana con Espinosa, y decia
tarle en la silla de San Pedro. Y res muchas veces este fray Miguel y este
pecto de haber entendido estas cosas, pastelero han de destruir á doña Ana,
se ausentó de esta villa de Madrigal por y á fray Miguel le ha de costar la ca
órden de doña Ana, y fué á Colindres, beza, y doña Ana y fray Miguel confie
donde fué preso y traido á la cárcel de san que le preguntaron al dicho médi
Medina; lo negó todo, y para que dije co si Espinosa parescia en algo, al rey
se la verdad fué menester darle tor don Sebastian, y el dicho médico les
mento in caput alienum, y confesó lo dijo que mirasen lo que hacian, que era
que está referido de él, y que entendia una perdicion y desatino aquel, y dicen
se trataba de sacar á doña Ana del mo todos que era tenido el dicho médico
nasterio, aunque no sabia cuando ni por el enemigo de fray Miguel, asi en
COII10. tienden que no se fiaria dél nada es
tos negocios, y conforme á esto pares
Sentencia de Juan Roderos, ce se le puede dar sentencia en la for
ma que á Blas Nieto.
Fallo, etc. que le debo de condenar
condeno á que sea llevado á las ga Culpa de Cristóbal de Pereda, alcaide
eras del rey nuestro señor donde esté de la cárcel de Valladolid.
y sirva por espacio de cuatro años sin
salario ni sueldo alguno, y por esta mi La culpa que resulta contra Cristó
sentencia, etc. bal de Pereda es que, la noche que don
Rodrigo prendió á Espinosa, le envió á
Culpa de Blas Nieto. notificar con un escribano, que pusie
se en un calabozo aparte á Espinosa
Blas Nieto ha servido á doña Ana de donde nadie le hablase y no le consin
Austria de irá ¿? á otras par— tiese escribir ni recibir cartas ningu
tes á negociar y de este de que se trata nas, y el dia siguiente se le notificó en
no ha tenido noticia ninguna, no obs presencia de don Rodrigo otra vez y
tante que es hermano de doña Luisa de otras muchas veces se le dijo, encargó
Grado, y esto paresce asi por las dili y mandó de palabra, y no obstante es
gencias que yo he hecho, y por las que to, el dicho Pereda sabiéndolo, le con
ha hecho el doctor Juan de Llano, an sintió á Espinosa despachase dos cor
tes consta que no sabia nada, y que reos áMadrigal, avisando como estaba
EL FINGiD0 REY DE PORTUGAL. 34.5
-
çºi

preso y apretado para que hiciesen ne-manos del juez aquellos pliegos para
gociacion con don Rodrigo para que le dar una direccion distinta á lo que re
soltase y estuviesen apercibidos, y esto sultaba en la causa, y lograr asi la di
fué causa de que º Miguel y doña minucion de la pena de los encausados:
Ana, quemasen todos, los papeles que otros han creido que eran papeles de
habia de este negocio, y esto consta la mayor importancia que se dirigian
del proceso y de la confesion de Espi á manos de doña Ana como á la perso
nosa, y porque es proceso que se hace na mas influyente y allegada al rey, y
en público y ha pedido término para contra quien menos culpabilidad re
descargarse no está en estado de sen sultaba en aquel proceso. Todo esto no
tenciarse, pero será condenado en al pasaba de ser simples conjeturas, por
gunos años de suspension , de oficio y que Felipe II calló siempre sobre el
alguna condenacion pecuniaria de que contenido de estos papeles.
antes daré cuenta á A. M. Terminadas ya las causas, y faltan
Otros algunos presos se prendieron do solo la aprobacion real á las senten
en el principio de este negocio con li cias consultadas, don Rodrigo Santi
geras ocasiones para averiguar la ver llan aguardaba su resultado en Madri
dad y saber si tenian noticia de estas gal. El doctor Juan de Llanos de Val
cosas, y habiendo sabido que no tenian dés, redoblando sus malos tratamien
culpa ni sabian nada, fueron sueltos. tos contra doña Ana, á la que tenia
De las sentencias que envio en este estrechamente presa en su celda im
papel, no envio razones ni fundamen pidiendo que la hablasen las monjas y
tos en derecho por no embarazar á ¿ castigar hasta el menor acto
Vuestra Magestad, que si fuese menes e deferencia y compasion de aquellas
ter y V. M. lo mandase, los enviaré religiosas para con su infeliz compañe
para que V. M. mande proveer lo que ra, ó mas bien prevaliéndose de esto
mas á su real servicio convenga.—Li para tener ocasion de entrar contínua
cenciado don Rodrigo de Santillan. mente en el monasterio, observaba
una conducta muy diferente de la que
El doctor don Juan de Llanos Val debia requerirse de un sacerdote y de
dés consultó tambien por su parte la un juez.
sentencia que creia deber imponerse á Perseguia diariamente á las monjas,
fray Miguel de los Santos, á doña Ana y á pretesto de tener que tomarlas de
de Austria y á sus dos servidoras do claracion queria estar solo con ellas y
ña Luisa Delgado y doña María Nieto. hablarlas sin testigos. Como mugeres,
Tardó mucho tiempo en contestar las religiosas habian naturalmente ha
á la consulta de los jueces, en que le blado algo de la causa que se estaba
indicaban las sentencias que pensaban siguiendo, referian cuantos pormeno
ronunciar, el rey Felipe II, por ha res sobre ella habian sabido, y esto
¿ hacia que las persiguiese el doctor
adeciendo uno de aquellos ata
ques de gota que le imposibilitaban Llanos Valdés, como lo hizo poniendo
ara todo, y que eran el preludio de presas á dos de ellas á quienes encon
a gravísima enfermedad que debía tró unas cartas en que de ello habla
arrebatarle la vida muy pocos años ban á sus parientes, y aun cuando su
despues. contenido era, sumamente sencillo y
Durante este tiempo, un alguacil natural, lo calificó de libelo, y á ellas
de don Rodrigo Santillan sorprendió las puso estrechamente presas.
un correo que venia de Portugal con Con el objeto de aterrarlas, y con
pliegos para doña Ana de Austria. Don abuso notable de su autoridad, las hi
Rodrigo recibió aquellos pliegos, y co zo reunir á todas en el coro bajo del
mo habia ya terminado la causa se convento el dia 3 de julio, y que el se
abstuvo de abrirlos, remitiéndolos al cretario de la comision Francisco de
rey, sin que hasta hoy se haya sabido Santander, que era otro eclesiástico
su contenido. no de mejor vida ni morijerada con
Algunos han creido que esto era ducta, las declarase á todas escomul
una trama de los conjurados que ha gadas.
bian hecho cuidadosamente caer en Es notable este documento de es
º
316 CAUSAS CELEBRES
=

comunion de las monjas, por las es ellas y de otras personas conforme á


presiones duras y violentas que con dicho, no publicasen ni revelasen á
tiene, y porque pinta el abuso que ya ninguna persona de dentro ni de fue
en aquellos tiempos se hacia de las ra de dicho monasterio por escrito ni
cosas religiosas, y con los mas torcidos de palabra ni de otra ninguna mane
fines. ra cosa ninguna de lo que habia pasa
La escomunion de las monjas dice do en el dicho capítulo cerca de unas
asi (1): cartas á manera de libello infamato
rio que fueron tomadas á dona Ana
Eaccomunion de las monjas. Belon y doña Ana de Tubia y doña
Isabelde Acebes, monjas deste dicho
AUTO, monasterio, que estan al presente
presas sobre estos negocios en que al
En la villa de Madrigal á 3 dias presente su merced está. Y que á las
del mes de julio de 1595 años, el se dichas presas ni á ninguna de ellas en
ñor don Juan de Llanos de Valdés, ninguna manera les dieren recados ni
juez apostólico y real en la presente billetes de ninguna persona de dentro
causa en que está en esta dicha villa. ni de fuera deste monasterio sin espre
«Dijo: que por cuanto luego que su sa licencia ó consentimiento de su mer
merced vino á esta dicha villa y entró ced, ni por ninguna via ni color: y que
en el monasterio de Nuestra Señora lo que alli hubiere pasado no lo reve
de Gracia la Real, de ello recibió por lasen á ninguna persona de dentro ni
presa á la señora doña Ana de Aus fuera de este monasterio por lo que
tria, y se entregó de la persona entre tocaba á la honra y autoridad de él y
otros mandatos que hizo á su priora, por otras justas causas: como todo lo
monjas y convento del dicho monaste susodicho les fué notificado á la dicha
rio, estando congregadas para ello en priora monja y convento en dicho ca
su capítulo juntamente con el vicario y pítulo y fuera de él por mí el presen
confesores de él, fué uno que debajo te secretario que doy fé. Y agora por
de excomunion mayor trina canónica informaciones le consta á su merced el
monitione praemissa, en la cual incur dicho señor juez apostólico, que las di
riese ipso facto lo contrario haciendo, chas priora, monjas y convento, é es
ninguna monja entrase en el aposento te dicho monasterio que estan presen
de la dicha señora doña Ana de Aus— tes y congregadas en su capítulo para
tria, ni tratasen con ella, ni la lleva este efecto ó algunas de ellas, no obs
sen nuevas, ni recados, ni tratasen con tante los dichos mandatos y censuras,
ella cosa ninguna de los negocios por en menosprecio dellas y de Dios
ser los inconvenientes tan grandes, Nuestro Señor y de su santa sede apos
que de ellos podrian resultar en deser tólica, en cuyo nombre su merced se las
vicio de S. M. é ansi mismo por otro puso y mandó: y en desacato de S. M.
mandato les mandó su merced á cada como protervas y obstinadas y olvida
monja en particular cuando las exami das de Dios Nuestro Señor V de sus
naba que no publicasen ni dijesen co conciencias, y de la obediencia natu
sa ninguna de los negocios, ni de lo ral que debemos todos á los mandatos
¿ cerca de ellos fuesen pregunta apostólicos, contraviniendo á todo lo
as debajo de las mismas censuras sin susodicho no lo han hecho ni cumplido,
licencia ó consentimiento de su merced antes al contrario todo ello, y han di
(de que doy fé) despues de lo cual ansi vulgado en este monasterio, y lo que
mesmo les mandó en 5 dias del mes peor es, fuera dél en toda esta villa y
de abril deste presente año, por otro personas que en ella rodean y estan,
auto en presencia de los dichos vica todas estas cosas de susoreferidas,
rios y confesores, que debajo de las estas andan todos estos negocios, y
mismas censuras con apercibimiento s demas cosas de susoreferidas por
que se procediese á reclamacion de causa de las susodichas ó algunas de
ellas publicadas y esparcidas como si
(1) Archivo general de Simancas—Nego se hubiesen apregonado: de lo cual
ciado de Estado, legajo 173. (1595). demas del gran pecado que en ello han
EL FINGlDO REY DE PORTUGAL. 317
==

hecho y ofensa tan grande de Dios contravenido á los dichos mandatos y


Nuestro Señor, y estando como estan cosas de susoreferidas y no se hubie
las dichas monjas que han contrave ren absuelto y venido á obediencia de
nido á lo susodicho excomulgadas y la Santa Madre Iglesia, y cumplido la
anatematizadas y apartadas del gre penitencia que le fuere por su merced
mio de Nuestra Santa Madre Iglesia dada, no las admitan á los oficios divi
con causa y precipitacion temeraria nos ni horas canónicas, ni entrar en
comulgado y llegádose á la mesa Sa ninguno de los coros de este conven
cramental de Nuestro Señor Jesucris to: pues como tales miembros apartados
to tantas y diversas veces, despues acá, de nuestra Madre Iglesia no pueden ni
no haciendo caso de las dichas censu deben ser admitidas en ella hasta ser
ras, estando como está reservada la absueltas: Y desde luego su merced
absolucion á S. S. y á su merced tan usando de clemencia mas que de rigor,
solamente, demas del gran deservicio con las tales obstinadas y proptervas las
de S. M. pues lo principal de estos ne amonesta paternalmente las veces que
gocios consiste en el secreto de ellos. de derecho puede y debe, y las encarga
Por tanto ahora de nuevo su merced el por las entrañas de la misericordia de
dicho señor juez apostólico, usando co Dios Nuestro Señor como á almas com
mo usa en esta parte de la autoridad pradas y redimidas con su preciosísi
apostólica á su merced concedida ma sangre, que salgan de tan ¿ pe
cumpliendo con el tenor del derecho y cado y abominacion en que el demonio
de lo que debe á su conciencia y al con sus enredos y lazos las tiene pre
servicio de Dios Nuestro Señor y de sas, ciegas y encadenadas, y que reco
S. M., declara y denuncia por las pre nosciendo su culpa, cada una venga á
sentes á dicha priora y monjas de es obediencia y pidan la absolucion y pe
te convento, á las que dellas hubieren nitencia debida á lo que cada una me
incurrido en las dichas censuras en reciere, que su merced está presto de
cualesquiera manera por contravenir recibirlas y admitirlas á ello, pues que
á los dichos mandatos arriba referidos en esto su merced no pretende mas
por públicas excomulgadas agrabadas que solamente sacarlas á las tales del
y reagrabadas, y las anathematiza y se pecado y censuras en que están, y
para de gremio de Nuestra Madre Igle su merced cumplir con lo que está
sia y de sus Sacramentos y sufragios, obligado á sacar con el secreto nece
y como tales miembros apartados las sario, la verdad de un negocio tan
denuncia y declara tan solamente co grande y tan del servicio de Dios Nues
mo dicho és á las monjas en particular tro Señor y de S. M. como en el que al
deste convento que hubieren contra presente cita: con apercibimiento que
venido á los dichos mandatos de su desde luego les hace que haciendo lo
soreferidos; y si lo que Dios Nuestro contrario procederá contra las tales re
Señor no quiera ni permita las suso beldes por todo rigor de derecho, y de
dichas que asi hubiesen incurrido en bajo de las mismas censuras y aperci
las dichas censuras y contravenido á bimiento les vuelve á mandar y amo
los dichos mandatos proterva y obsti nestar que no digan nitraten cosa nin
nadamente imitando la dureza de Pha guna de lo que se ha tratado por es—
raon, se dejasen estar en las dichas crito ni palabra, con ninguna persona
censuras, porque las que no contentas de fuera de este monasterio, sino fue
con una pena caso mayor sean prendi se con el vicario y confesores de él,
das y castigadas: su merced manda á la para que las aconsejen lo que convie
priora y subpriora y vicario de este ne á sus almas para salir de las dichas
convento, que están presentes debajo censuras sin espresa licencia y man
de las mismas censuras, y de privacion dato de su merced el cual ansi lo pro
de oficios y de voz activa y pasiva: ip veyó y mandó y firmó de su nombre.—
so facto incurrenda por espacio de El doctor Juan de Llano de Valdés.—
cuatro años: que no admitan ni con Ante mí.—Francisco Santander.
sientan en ninguna manera, que nin
guna monja que supieren ó entendie Lanzado el anatema contra aque
ren en cualquier manera, que ha llas pobres religiosas sirvió solo para
548 CAUSAS CELEBRES e
5 ==

contristarlas, pero no produjo el efecto incurrido en las dichas censuras y con


que se habia propuesto el eclesiástico. travenido á los dichos mandatos, se
Creyó éste que heridas de espanto las vengan á absolver dellas y recibir la pe
religiosas se apresurarian á acudir á élnitencia saludable que su merced les
cuando fingiendo al dia siguiente com - impusiese conforme á sus culpas de ca
¿ del estado en que se halla da una; pues su merced usando con ellas
an privadas de la gracia, y separadas en esta parte del amor paternal de sus
de la comunion de los fieles, se presen almas como tal juez apostólico en esta
tase él á ellas dispuesto á sacarlas de causa y que en ella tiene y usa de las
aquel miserable estado, y á restituir veces de S. S. viene solamente á oirá
las á la gracia y al gremio de la Igle cada una de las que quisiere venir y dar
sia. Esto era lo que buscaba el astuto les la absolucion asi como les impuso
Juez. la otra excomunion, y á admitirlas al
Para ello hizo que al dia siguiente gremio de nuestra Madre Iglesia, impo
se presentase su secretario Francisco niéndolas penitencia saludable, y que
Santander, cómplice en su desordena para oirlas y darlas la dicha absolucion
da conducta, é hizo leer á las monjas espera y estará toda esta tarde en el di
un auto que habia dictado, concebido cho capítulo, donde su merced al pre
en los términos siguientes: sente está: y para que todo lo susodi
cho venga á su noticia de las dichas
AUT0. monjas, ansi lo proveyó y mandó y fir
mó de su nombre.—El doctor Juan Lla
no de Valdés. Ante mí.—Francisco
E despues de lo susodicho á cuatro Santander.
dias del mes de julio de este dicho
año de 1595, estando en el monasterio No surtió el efecto que se habian
de Nuestra Señora de Gracia la Real de propuesto estos dos eclesiásticos el
esta villa de Madrigal, en el capítulo de ardid que tramaban contra las infeli
él donde se examinan los testigos de ces religiosas. Estas, demasiado pru
esta causa, el doctor don Juan de Lla dentes, ó advertidas tal vez por algu
no de Valdés juez apostólico en esta nas personas de las que se interesaban
causa dijo: Que por cuanto ayer estan en la causa, se negaron constantemen
do el dicho convento congregado en el te á venir á hablar á solas con el juez
dicho capítulo, yo el presente secreta apostólico, como deseaba.
rio de la comision lei y notifiqué el auto Copiamos á la letra la notificacion y
de su merced retrocontenido á la prio fé de este auto, porque ella refiere me
ra, monjas y convento deste dicho mo jor que nosotros pudieramos hacerlo
nasterio en sus ¿ (de lo que cuanto en este asunto pasó.
doy feé) y por el dicho auto quedaron
declaradas por públicas escomulgadas NOTIFICACION Y FÉ.
las monjas que hubieren contravenido
á los mandatos contenidos en este di
cho auto retrocontenido á que se refie E despues de lo susodicho este di
re, y por su notificacion, y porque las cho dia mes y año, dichos luego in con
dichas monjas no puedan tener escusa tinenti estando en el dicho capítulo del
en ningun tiempo de que su merced no dicho monasterio para ejecucion de lo
las ha querido oir ni admitir al benefi contenido en el dicho auto suprascrip
cio de la absolucion, por tanto usando to, el dicho señor juez apostólico man
en esta parte con las susodichas, de cle dó á doña María Rascon, monja y tor
mencia y misericordia, su merced desde nera deste dicho monasterio, que lue
luego manda notificar á la priora deste go llamase á doña Ana de Espinosa, vi
dicho monasterio que luego junte sus caria priora de él, para notificarla el
monjas en choro bajo, ó donde les pa dicho auto supra contenido, y habien
reseiere, , y de parte de Dios Nuestro do ido la dicha tornera á llamar á la di
Señor y de nuestra Madre Iglesia y de cha priora para lo susodicho, no quiso
su merced en su nombre las amones venir, y la dicha tornera respondió que
te que las que dellas se sintiesen haber decia la dicha priora, que la perdona
EL FING1DO REY DE PORTUGAL. 39
-
vo nº º «

se, que no podia venir que estaba in Esta es la carta de que habla
dispuesta, y ansi no vino: y yo el dicho mos (1):
secretario la ví luego á la puerta del
choro bajo á la dicha priora que está SEÑOR:
frontera al dicho capítulo. Y por no
querer venir la dicha priora, mandó lla Migran necesidad y la confianza
mar su merced á doña María de San Vi que tengo de su mucha benignidad
cente, subpriora del dicho monasterio, de V. M., junto con la licencia que
la cual habiendo venido á su mandato, me hizo V. M. merced de inviarme pa
yo el dicho secretario notifiqué é hice ra hacer esto cuando lo supliqué á
saber á la dicha subpriora lo contenido V. M., me han dado ánimo para hace—
en el dicho auto retroscripto (de que llo, y que sirva ésta cuando llegáre á
doy fé), y luego la dicha subpriora fué sus reales manos de V. M. de repre
á congregar las dichas monjas y vol sentarme á sus pies de S. M. pidiéndo
vió diciendo como ella habia congrega le perdon de mis inorancias de que
do el convento en el choro bajo de él y me duela tanto que bastára si fuera
les habia amonestado y dicho lo que el por mis pecados á hacerme santa; y
señor juez apostólico mandaba y amo suplicando humildemente á V. M., pues
nestaba en el dicho auto, y que la di se ha visto mi engaño y lo que padezco
cha priora y todo el convento, y ella se duela de mi honra, pues soy hija
en su nombre respondian que les die de su hermano de V. M., y no dice
sen traslado de lo susodicho, y el dicho bien con la cristiandad de V. M. que
juez apostólico dijo que ya lo oia y que por un deservicio de inorancia se
ien saben y les es notorio lo que ¿ la memoria de tantos servicios
se les habia notificado, que si alguna echos tan de voluntad, y mire V. M.
quisiere venir á absolverse, que su con cuantos falsos testimonios anda
merced la esperaria hasta boca de no lastimada mi honra por el mundo, y
che en el dicho capítulo, y asi lo hi que los confirman ocho meses de pri
zo su merced, y aunque esperó no qui sion tan rigurosa que estando en un
so venir ni vino ninguna monja á ab monasterio me quita los Sacramentos
solverse, siendo testigo de todo lo que y la Misa, cargada de mil sinrazones y
dicho es, doña María de Portillo pro agravios que por descargo de mi con
visora, y doña Inés de Cangas, y doña ciencia quiero que V. M. los sepa, pues
María Rascon, torneras, y otras monjas á la tambien importa. Yo he pedi
del dicho monasterio. Y en fé de todo do al doctor Llanos, que pues á mí me
lo susodicho, yo el secretario lo firmé llevan por tanto rigor de justicia, me
de mi nombre, fecha ut supra.—Fran conceda, pues en ella cabe y no se nie
cisco de Santander, notario apostólico ga á ningun facineroso, un letrado y un
y real. procurador; y estos no para que me
defiendan de V. M. que su echura soy
Hallábanse, pues, las monjas si no y á sus pies me pongo para que V. M.
en estado de completa rebeldía, á lo ordene de mí á su gusto, sino para po
menos dispuestas en su mayor parte á der con libertad dar cuenta á V. M. de
no acceder á los deseos del comisiona las injusticias que me hace el dicho
do, doctor Juan Llano de Valdés. Asi doctor, y porque para decir esto y su
es que prodigaban algunos consuelos modo de proceder en esta casa tengo
mas á la infeliz doña Ana de Austria, muy grandes ocasiones y no se pue
llegando hasta el caso de que las encar den dar por carta, suplico á V. M. por
adas de su custodia le proporcionaron un solo Dios me mande proveer de
os medios de que hubiese escrito dias una persona de sana conciencia, y que
antes del suceso de la escomunion que no desee mi daño para que examine
acabamos de referir, una carta al rey mi vida y las quejas que yo le diere,
Felipe II, en que aquella desgraciada y pueda como testigo de vista dar no
señora imploraba su piedad y compa ticia á V. M. de todo y, no permita
sion. Sin duda, habia podido traspirar
algo de lo severo y duro de la senten (1) , Archivo de Simancas—Negociado de
cia que al rey se habia consultado, Estado, legajo 173. (1595). -
320 CAUSAS CELEBRES.

V. M. sea yo sentenciada, sin que se Sin embargo, queriendo dar á nues


admitan mis descargos por persona tros lectores una idea de los escesos
desapasionada ante quien yo libremen ¿ alli pasaban, copiamos la carta
te los pueda dar; y esto tendrá incon el nuevo vicario de aquel convento,
veniente si el dicho doctor lo sabe, ú fray Andrés Ortiz á don Cristóbal de
se hace de suerte que él tenga jurisdi Mora, conde de Corte Rodrigo, del
cion para estorbarla, porque ante él nai consejo de Estado de S. M. y del de la
de dirá verdad ni él la averiguará sino Guerra el dia 4 de julio de 1595.
lo que le estuviere bien, y pues á V. M. Héla aqui:
le conviene ser avisado y á mí descar—
garme, suplico á V. M. dé órden para Aunque parezca cosa nueva á V. S.
ello, sin que esta carta ni esta dili escribirle yo que soy el vicario de es—
gencia mia venga á su noticia, y servi tas señoras de Madrigal agora poco he
rá esto de que V. M. me haga merced venido; pero no es cosa nueva pensar
de que lo que á mis particulares y des que en todo lo que se ofreciere hacer
ta casa tocan se concluyan con breve merced á estas señoras lo hará V. S.
dad, pues será tanto servicio de Dios como quien és, considerando que es
y evitar tantas ofensas como se le ha tan metidas entre paredes y con esta
cen, y socorrer V. M. una desdichada confianza me atrevo á suplicar de su
puesta en tantas desventuras cuanto parte y de la mia á V. S., nos la haga
no pueden decirse, y advierta V. M. en dar órden como el doctor Llanos
que es servicio suyo que se halle mi no entre allá dentro á la clausura del
inocencia y buena vida cómo se halla monasterio, que entra cada dia que no
rá haciéndoseme la mercad que pido, sea de fiesta y está endevotado con
y porque á su confesor de V. M., por una religiosa bien moza y hermosa y
mas secreto escribo mas largo para el secretario con otra. la. dado
que dé á V. M. cuenta. No digo mas de sayas de color de tornasol, y hábitos
que guarde Dios la católica persona de muy airosos; pasan allá cosas muy
V. M. para aumento de su santa fé y agenas de lo que es religion, hasta
defensa de huérfanos como yo le pido abrazallas muchas veces y tenellas de
cada dia. De esta cárcel á 26 de junio las manos, y estar hasta de noche y
de 1595 años.—Doña Ana de Austria. no querer luz, y hacerla matar y que
darse á oscuras. Seria nunca acabar
El escándalo que habia producido decir lo que hay, y remitirme al pa
el acto de la escomunion de toda sse dre que lleva esta y á un memorial
religiosas del monasterio, y mas que que lleva de lo que hay que segun las
nada las verdaderas causas que moti religiosas me cuentan todo es verdad,
vaban aquellos procedimientos, hicie y agora con gran rabia y enojo ha
ron que las religiosas dirigiesen un puesto muchas descomuniones que no
memorial en que hacian presente á digan cosa de lo que hay allá dentro,
S. M. con aquella misma fecha los ver creo que está tan enojado porque de
gonzosos escesos á que se entregaba el allá le han avisado de sus entradas
juez eclesiástico y su secretario, sedu con tanta nota sin necesidad mas de
ciendo á algunas religiosas, llegan la que el quiere fingir: confiado en la
do hasta proponer á don Rodrigo cristiandad de W. S. que siempre pre
Santillan que tomase una querida ¿ tende se sirva á Nuestro Señor, y que
entre ellas, y espresando lo acaeci se compadecerá de esta señoras empa
do en el monasterio con tal sencillez, redadas, quedó por perpetuo capellan
pero al mismo tiempo con tanta clari de W. S. á quien guarde Nuestro Se
dad, que nosotros no podemos trascri ñor muchos años, amen. De Madrigal
bir este documento original, que exis á 4 de Julio.—Fray Andrés Ortiz.
te tambien en el archivo de Simancas,
que lleva por título: «Memorial de Estas reclamaciones sirvieron para
o que pasa para que se remedie en el activar la conclusion de la causa, pues
convento de monjas de Madrigal,» por restablecido el rey, dió su aprobacion
que creeríamos manchar con él las pá á las sentencias consultadas, mandan
ginas de esta obra. do á don Rodrigo Santillan que proce
32
El FINGIDo REY DE PORTUGAL.
3= -=

diese á ejecucion al juez eclesiásti luego esté reclusa, en su celda por


co, don Juan de Llanos Valdés, que tiempo y espacio de cuatro años pri
procediese á pronunciar la sentencia meros siguientes, sin que pueda salir
de doña Ana y demas personas ecle de la dicha celda mas de á oir misa los
siásticas, suspendiendo el hacerlo con dias de fiesta tan solamente vendo
fray Miguel de los Santos, el cual de recta via al coro acompañada de dos
bia de conducir él mismo á Madrid, monjas graves y ancianas que la prela
esperando él su llegada en Guadarra da de este dicho monasterio y de el
ma las órdenes terminantes de S. M. que se le nombrare le señalaren y que
En efecto, el doctor Llanos el dia vuelva á su celda de la misma manera,
20 de julio de 1595, se presentó en la y en ella no pueda entrar ni hablar con
celda donde se hallaba recluida doña la dicha doña Ana de Austria persona
Ana, y la notificó la sentencia que ha ninguna en el dicho tiempo, é asimes
bia pronunciado; sentencia que aque mo la condeno en que todos los viernes
lla señora, aunque afligidísima, oyó con de los dichos cuatro años ayune la di
resignacion y presencia de ánimo, tan cha doña Ana á pan y agua, y mas la
acostumbrada se hallaba la infeliz ha condeno á que perpétuamente no pue
cia cerca de un año á padecimientos y da ser prelada en este dicho monaste
trabajos. La sentencia fué la siguien rio ni en otro ninguno donde estuvie
te: re, ni la pueda servir ni sirva ninguna
monja de él ni otra persona si no fue
En el negocio y causa criminal que ren las criadas comunes del dicho mo
por comision apostólica se ha causado nasterio que sirven á las demas reli
pende ante nos en esta villa de giosas, y la condeno asimismo que sea
¿ y en el monasterio de mon tratada la dicha doña Ana de Áustria
jas de nuestra señora de Gracia la Real en todo como una monja particular,
de la dicha villa, en º de oficio de ansi en este monasterio como en otro
justicia hemos procedido y procedemos cualquiera donde estuviere, ansi en el
contra doña Ana de Austria monja pro llamarla como en todo lo demas, y man
fesa del dicho monasterio de la órden do que esta mi sentencia sea llevada á
de San Agustin, vistas las probanzas pura y debida egecucion con efecto, y
y averiguaciones hechas sobre el caso, se ejecute como en ella se contie
y las confesiones y lo demas que en ne, sin embargo de cualquiera ape
esta parte ver convenia y la culpa que lacion, que de ella se interpusiere
de todo ello resulta contra la dicha do en cualquier manera por justas cau
ña Ana de Austria, que por la calidad sas que á ello me mueven, y por cuan
de su persona y por otras justas cau to asi conviene al servicio de Dios
sas aqui no se declaran, etc. Nuestro Señor y de S. M. Reservando
Fallo que debo de condenar y con como reservo en mí cualquiera decla
deno á la dicha doña Ana de Áustria racion y duda que se pudiere ofrecer,
monja susodicha, á que sea sacada y en la inteligencia de ella, y asimismo
salga de este dicho monasterio de nues el poder dar y proveer cualesquier
tra señora de Gracia la Real donde al mandatos que para ejecuciou de esta
presente está, para otro que le fuere mi sentencia, fueren necesarios y me
por mí ó por otra persona, que para pareciere convenir hasta su verdadera
ello tenga poder y facultad señalado, ejecucion, y por esta mi sentencia juz
y que salga y lo cumpla cada y cuando ando ansi lo pronuncio y mando.—El
que la fuese ordenado y en la forma ¿ Juan Llano de Valdés.—Pronun
que se la ordenase sin poner en ello cióse viernes á 21 de junio de 1595 es
escusa, ni dilacion alguna, y en el en ta sentencia y notificóse.—Ante mí,—
tretanto que se le señala y ordena la Francisco Santander, secretario de la
parte donde ha de ir, esté en el que comision.
ahora está, y en este dicho monaste
rio y en el que se le señalare desde A doña Luisa Delgado y doña Ma
ría de Nieto, religiosas del mismo mo
(4) Archivo general de Simancas.-Nego nasterio, que eran las que habian ser
ciado de Estado, legajo 172. vido á doña Ana Austria, que ha
322 CAUSAS CELEBRES,
E-s

bian sabido en parte sus secretos aun se al bien de su alma, se despidió


cuando las infelices de nada eran cul de él.
pables porque obraban por órden de Convenido ya don Rodrigo de San
su señora, y todo su delito consistia tillan con el jesuita, aquella misma
en haber servido á la mesa á esta tarde hizo que volviese y le manifesta
cuando comia con el vicario ó el fingi se que habiéndose enterado del juez,
do rey don Sebastian, hallándose en sabia que la sentencia iba á notificár
la misma persuasion de su ama de sele aquella misma tarde, y que debia
que era tal rey, las sentenciaron en de ejecutarse en el término del tercero
ocho años de cárcel en sus celdas, á dia, animándole á que tuviese fortale
ser sacadas del monasterio y privadas za y conformidad con la voluntad de
de voz activa y pasiva, haciéndolas Dios.
ayunar á pan y agua todos los vier Aquella misma tarde se presentó
nes de los dichos ocho años. el escribano, y le leyó la sentencia
Hecha esta notificacion por el juez, que ya conocen nuestros lectores, por
en cumplimiento de lo mandado por el la que se le condenaba á ser arrastra
rey, aunque con bastante disgusto su do, ahorcado en la plaza de Madrigal,
yo, porque se hallaba muy bien aveni hecho cuartos, y colocada su cabeza
do en Madrigal y trataba de prolongar en una jaula en un sitio público. Dió
alli su permanencia mucho mas agra sele tambien lectura de la órden del
dable para él, que la del pueblo de rey en que aprobó la sentencia.
Guadarrama donde preveia tener que En el acto Gabriel de Espinosa dijo
aguardar algun tiempo; salió el doctor al escribano que esperaba que como á
don Juan de Llanos Valdés acompaña todo reo se le oiria, y se le daria un
do de su secretario Francisco de San letrado para su defensa pública. El es
tander, llevando consigo en un coche y cribano le manifestó entonces que era
con algunos arcabuceros de escolta á diligencia escusada, porque pronun
fray Miguel de los Santos. Al llegar á ciada una vez la sentencia en definiti
Guadarrama se paró, en cumplimiento va no habia ya lugar á la defensa.
de las órdenes reales, y avisó á Feli Entonces con voz entera y ánimo
pe II. esforzado Gabriel de Espinosa dijo,
Entretanto al día 28 de julio por que apelaba de aquella sentencia. El
la mañana hizo el alcalde Santillan escribano le hizo presente á esto que
que un padre de la compañía de Jesus, á quien podria apelar, cuando acababa
que tenia gran reputacion de saber y de leer la confirmacion del rey.
de virtud, se presentase en el encier Con noble entereza, con vigorosa
ro en que incomunicado se hallaba entonacion, dijo entonces Espinosa,
siempre Espinosa, para prepararle al que dijese al juez, para que éste lo hi
duro trance que le esperaba. ciese presente al rey, que apelaba de
En cuanto Gabriel de Espinosa vió su sentencia ante un tribunal donde se
delante de sí al religioso comprendió admitian todas las apelaciones de los
que habia alguna grande novedad en hombres, y ante el cual no pueden re
la causa; asi es que con alguna altera husar contestar ni los jueces, ni los
cion le preguntó qué habia: y el re reyes, ante el tribunal de Dios.
ligioso le escitó con las palabras mas Retiróse el escribano, volvió á en
fervorosas á que aprovechase el tiem trar el jesuita, el cual con sus pala
po que le restaba de vida, porque era bras llenas de uncion religiosa y cari
muy corto. dad evangélica le hizo conocer lo de
Maravillado se mostró Espinosa de sesperado de su situacion, y que no
esto, creia que se prolongaria aun bas habia para él remedio alguno en el
tante tiempo su causa, pues no se le mundo; y con sus pláticas logró sere
habia admitido defensa alguna, y so nar el espíritu de Gabriel de Espinosa
bre todo no se le habia notificado la escitándole á que hiciese una confe
sentencia. Hízole entonces presente el sion general de todos los actos de su
religioso que no tardarian mucho en vida, y las culpas con que durante
venir á notificarla, y dándole nuevos y ella habia ofendido á Dios.
saludables consejos para que atendie Comenzó, en efecto, desde aquel
EL FINGIDO, REY DEPORTUGAL. 323
Scº-=

mismo momento á ponerse bien con dose todos los demas, que terminada
Dios, haciendo una larga confesion que su p'ática fueron admitidos nueva
hubo que suspender muchas veces du mente á su presencia, y con los que
rante el tiempo que estuvo en la capi conversó con la mayor serenidad y
lla, por el cansancio y flaqueza en que tranquilidad. -

comenzó á hallarse. Lamentábase so A las cuatro de la tarde fué sacado


bre todo de que el rey no hubiese ac de la cárcel, colocado en el seron, y
cedido á la peticion que tantas veces arrastrado por una mula hasta el sitio
habia hecho de enviar una persona de donde se hallaba colocada la horca. Al
las muchas que habia á su alrededor oir que el pregonero iba dando el pre
en la córte que le conocian para que gon que habia acordado el juez, y que
viese quién era. el mismo rey de su propio puño y le
Entonces el confesor le aconsejaba tra habia enmendado, al oir gritar: Es
á que en el fatal trance y situacion en
ta es la justicia que manda hacer el rey
que se hallaba, manifestase francamen nuestro señor..... en este hombre por
te quién era, haciéndole concebir la traidor á S. ¿ haberse fingido per
esperanza de que tal vez aquello po— sona real, siendo hombre bajo y em
dria hacer que se le perdonase la vida, bustero; con el mayor enfado, y per
ó sino que se le conmutase el género diendo por un momento su serenidad,
de muerte para no sufrir la infamia de lo contradijo diciendo:
la horca. Espinosa manifestó enton —Eso solo Dios lo sabe.
ces que no queria comprar la vida á No bastaron todas las exhortaciones
lanta COSta. de su confesor y de los religiosos que
La víspera del dia de la ejecucion le acompañaban para que pudiese to
recibió el Sacramento de la Eucaristía, lerar con resignacion las calificaciones
admitió la visita de algunos religiosos de hombre vil, bajo y traidor.
e la órden de San Francisco, que en Al llegar á la horca le sacaron del
los momentos precisos en que descan seron, y colocado de pie miró con cierta
saba su confesor, el padre jesuita, le altivez á todas partes mostrando una
hablaban de cosas espirituales, y man estraordinaria serenidad. Don Rodrigo
tenian su alma en los actos de re Santillan se hallaba en una de las ven
ligion. tanas de la cárcel para presenciar la
El martes 1.º de agosto era el dia
ejecucion: al verle Gabriel de Espino
señalado para la ejecucion. Recomensa le llamó por su nombre y se propo
dó á su confesor con el mayor interés
nia sin duda dirigirle la palabra, pero
á su hija, aquella hermosa niña que ha
su confesor se lo impidió haciéndole
bia tenido algun tiempo en su compaver que debia olvidarse de todas las
ñía en el convento dcña Ana de Aus cosas de este mundo para pensar úni
tria, y que despues habia sido tambien camente en su alma.
encerrada en una prision. Recordaba Se hincó de rodillas al pie de la
tambien el pesar y el disgusto que ten horca, y reconciliándose nuevamente
dria doña Ana de Austria cuando su con su confesor en un breve rato, co
piese la ejecucion de su muerte. menzó á subir con paso firme, seguro,
La idea de morir como una persona y sin dar ningun indicio de temor en
vil y baja, era la que mas le preocupa su rostro, aquellas fatales escaleras,
ba, y la que no bastaban á combatir con el dogal al cuello. Se compuso su
ni el celo ni las piadosas exhortaciones ropa con el mismo cuidado é indife
de los que le asistieron en su muerte. rencia que si se estuviese preparando
Una hora antes de esta, mandó el para un festin.
juez que llevasen á su presencia el se Por dos veces repetidas intentó ha
ron donde habia de ser arrastrado, y blar al juez, pero los sacerdotes que
le echasen la soga al cuello, atándole le asistian, al ir á pronunciar una pa
las manos, y poniéndole en ellas un labra colocaban sobre sus labios el
crucifijo. crucifijo, y llamaban su atencion á que
Espinosa llamó entonces á su con pensase únicamente en aquel Divino
fesor, con el que estuvo como un cuar Señor ante cuya presencia dentro de
ºto de hora en conversacion, retirán algunos instantes iba á comparecer.
9.
324 CAUSAS CELEBRES.
=

Entonces resignado y cediendo á las condenada á una estrecha reclusion


instancias de sus confesores, les ase por cuatro años, y á ser privada del
guró que solo trataba de pedir perdon tratamiento de excelencia y de todas
al pueblo, y encargarle que encomen las distinciones que antes como á per
dase su alma al Señor. sona real se le tributaban.
Permitiéronle los religiosos que hi Llegó á Avila la pobre señora, y
ciese esta súplica á las gentes que lle aquellas religiosas á pesar de las seve
naban la plaza del pueblo de Madrigal, ras prescripciones del rey Felipe II, la
y Gabriel de Espinosa, lo hizo con una trataron no como á una desterrada, si
voz tan clara, tan fuerte y sonora cual no como á una cariñosa herinana.
si se hallase en una reunion popular á Pusiéron se en ejecucion todas las
la cual dirigiese la palabra, no como un sentencias que habia dictado don Ro
reo, sino como un caudillo vencedor. drigo de Santillan, y que habian sido
Al instante el verdugo, poniéndose aprobadas por el rey. Asi es que en
caballero sobre sus hombros, se lan los dias siguientes al suplicio de Ga
zó con la cuerda en el espacio, dejan briel de Espinosa se dieron pública
do cadáver á aquel hombre que lleva mente azotes á los condenados á ellos
ba consigo al sepulcro el secreto de su y se echó á galeras á otros; pero , la
orígen y de su existencia. que escitó mas la compasion de todos
Sin duda, efecto de la turbacion y por su menor culpa y por su desgracia
del asombro que causara en el mismo fué el ama y manceba del pastelero,
verdugo el porte, ademan y continen Inés Cid, aquella infeliz que habia su
te estraordinario de aquel hombre, frido el tormento que le habia antici
tardó largo tiempo en sofocarle, pre pado la hora de ser madre: despues de
sentando al pueblo un asqueroso y re una prision de cerca de un año, y de
pugnante espectáculo. - haber sido públicamente azotada, fué
En el fondo de su encierro supo á cumplir su condena , de destierro
doña Ana de Austria todas las cir perpétuo del reino, yendo por los pue
cunstancias de la ejecucion del desgra blos con sus dos hijos pequeños, pi
ciado Espinosa; tal vez llegaria hasta diendo limosna para poder emprender
ella el eco de la algazara del pueblo y seguir su viage, no habiendo encon
reunido para presenciar aquella san trado á nadie que hubiera querido
grienta ejecucion. No pudo menos su encargarse del cuidado de aquella ni
corazon de enternecerse al saber el ña, meses antes tan cuidada y regala
desgraciado fin de aquel hombre á da en el monasterio y que escitaba por
quien engañada, habia amado tanto su belleza la atencion de todos. Quizás
en otro tiempo, y veia al mismo tiem esta desgraciada antes de llegar á la
po la severidad que se desplegaba so frontera habria perecido víctima de la
bre aquel de quien habia sido invo miseria y del oprobio, porque no vol
luntariamente cómplice. vió á saberse mas de ella. -

Recibida pues, la órden del rey Restaba de todos los encausados en


para que fuese á cumplir su condena el célebre proceso de Madrigal el pro
á Avila en un monasterio de agusti nunciar la sentencia contra el princi
mas que hay en aquella ciudad, llama pal reo de él, fray Miguel de los San
do Nuestra Señora de Gracia, la infe tos. El juez apostólico, el doctor Lla
liz doña Ana, acompañada del provin nos, siguiendo las instrucciones dic
cial y de otros religiosos de su órden, tadas por el mismo Felipe II se paró
salió en un coche para aquel destierro en Guadarrama. A los pocos dias
en donde iba á encontrar en lugar de recibió órden para que se traslada
una celda un sepulcro un poco mas ca se con el preso á Galapagar. Alli
paz que el que habia de tener despues permaneció todavía cerca de una se
de su muerte. Con lágrimas en los ojos mana, y habiéndole mandado que se
y angustia en el corazon se despidie presentase en Madrid con el reo, hizo
ron todas las monjas de aquella seño entrega de este y de la causa que ha
ra en quien habian visto antes su com bia formado al presidente del consejo
pañera, y á la que contemplaban aho de Castilla, Rodrigo Vazquez.
ra víctima inocente de su credulidad Practicó este alto magistrado otras
EL FINGIDO REY DEPORTUGAL. 325
-
=-= -

nuevas diligencias tomando varias de sion apostólica entre partes de la una


claraciones, tanto á fray Miguel de los Matías Rodriguez promotor fiscal, actor
Santos, como á otras personas que se acusante, y de la otra fray Miguel de
hallaban complicadas en el asunto, y los Santos clérigo presbítero y fraile
que en virtud de las declaraciones an profeso de la órden de San Agustin,
teriores, habian sido traidas presas reo acusado: vistos los autos y mérito
desde Portugal. de este proceso y lo demas que en este
Nada adelantaron estas diligencias ver convenia, etc.
en la averiguacion de los hechos; asi Fallamos que el dicho Matías Ro
es que deseando terminar esta causa driguez promotor fiscal susodicho, pro
mandó el rey el dia 16 de octubre de bó su acusacion contra el dicho fray
1595, al juez eclesiástico que dictase Miguel de los Santos como probar le
la sentencia que ya anteriormente he convino cerca de los delitos de que fué
mos visto tenia consultada con el rey, acusado, dámosla y pronunciámosla
que la notificase y dispusiese su eje por bien , probada de que habiendo
cucion. Asi se verificó. sido traido el dicho fray Miguel á es
En aquel mismo dia el doctor Juan tos reinos de Castilla de los de Por
de Llanos Valdés, acompañado del al tugal por culpado en los alborotos
calde de casa y córte, don Diego Ca que en aquellos reinos hubo contra
nal, fué á la cárcel y sacando de su en el rey nuestro señor, favoreciendo la
cierro á fray Miguel de los Santos, le parte de don Antonio de Portugal, que
hizo entrar en su coche y lo llevó á la tirana é injustamente usurpando el tí
iglesia parroquial de San Martin, don tulo de rey se pretendia alzar con él,
de anticipadamente y con gran pre estando el dicho fray Miguel en la
mura se habia preparado todo para villa de Madrigal por vicario del mo
que se verificase la degradacion á que nasterio de monjas de Nuestra Señora
habia sido sentenciado. de Gracia la Real de aquella villa cin
Iba á verificar esta terrible ceremo co años habia, no se enmendando ni
nia de la Iglesia, el arzobispo Doris corrigiendo de la dicha culpa, ni sien
tan, el cual tenia que separar del nú do grato (como debiera á las mercedes
mero de los ministros de la Iglesia á que S.M. le habia hecho) desde luego
fray Miguel de los Santos, y dejarle que comenzó á ser vicario del dicho
entregado á todo el rigor de las le monasterio dando la última muestra
yes civiles. de su incorregibilidad, sabiendo y con
Fray Miguel de los Santos iba páli fesando el dicho fray Miguel de los
do, macilento como un hombre que Santos ser el rey nuestro señor el ver
habia estado á punto de espirar en el dadero y legítimo rey de Portugal y no
cruelísimo tormento que habia sufrido otro ninguno, y despues de sus muy
en la villa de Madrigal; como un hom largos y felices años, el príncipe nues
bre que á sus años y á su vida auste tro señor y sus sucesores, fué persua
ra reunia las enfermedades y los acha diendo á una monja profesa del dicho
ques inseparables de su edad. . monasterio como el señor rey don Se
Asi que entraron en la iglesia hi bastian que está en el cielo, era vivo y
cieron poner de rodillas en las gradas andaba peregrinando por el mundo
del altar mayor á fray Miguel de los cumpliendo cierto voto que habia he
Santos, que con actitud recogida, hu cho, y que se habia de casar con la di
milde y reverente, oyó la lectura de cha monja fingiendo para ello muchas
la sentencia que habia pronunciado el revelaciones y visiones divinas que
juez apostólico, y que en voz clara y decia que Nuestro Señor le revelaba
sonora hizo el segretario de la comi diciendo misa, y en otras sus oraciones
sion, Francisco Santander. Hé aqui la hasta tanto que la dicha monja y ótras
sentencia (1). que sabian el negocio lo creyeron, y
En el negocio y causa criminal que haciendo asimismo prevenciones con
ante nos ha pendido y pende por comi personas que venian de Portugal para
que si la dicha monja les preguntase
(1) Archivo general de Simancas.—Nego si era vivo el dicho señor rey de Por
ciado de Estado, legajo 173. - tugal don Sebastian, le dijesen que sí,
326 CAUSAS CELEBRES.
-a

y continuando su intento y maraña hi nia en secreto para sí luego que esto se


zo que Gabriel de Espinosa, pastelero, hiciese, descubrir el engaño del dicho
natural de Toledo, echado á la puerta Gabriel de Espinosa para que pudiese
de la Iglesia, siendo como era hombre el dicho don Antonio que estaba pre
vil y bajo se fingiese y dijese ser el di venido, apoderarse y hacerse señor de
cho rey don Sebastian y tratándole y los dichos reinos de Portugal, como lo
respetándole y escribiéndole y hacien tenia tratado con él, sobre que asimes
do que la dicha monja le escribiese mo el dicho fray Miguel de los Santos
cartas estando ausente como tal rey tenia correspondencias con , el dicho
el susodicho fray Miguel le dió medios don Antonio. En todo lo cuál el dicho
y descubrió secretos que le aprovecha fray Miguel de los Santos siendo incor
sen para ser tenido por tal, y para que regible y contra la Magestad del rey
con ellos hiciese creer lo mismo á la di don Felipe nuestro señor, rey y señor
cha monja y la persuadiese á que se propio y verdadero de los dichos rei
casase con él, pareciéndole la dicha nos de Portugal, y contra ellos mismos
monja ser persona de importancia para y su república, y contra la obligacion
conseguir el dicho efecto, á la cual asi que le tenia como á su rey y señor na
mesmo certificó el dicho fray Miguel tural, y que asimismo como religioso
que en las dichas revelaciones que fin letrado y vicario del dicho monasterio
gia, le decian que el dicho Gabriel de tenia cometió graves y gravísimos,
Espinosa que estaba presente en la mi inormes y inormísimos delitos, y fué
sa, era el dicho señor don Sebastian y causa de los que cometió y cerca de
ue Nuestro Señor le señalaba con el ello hizo el dicho Gabriel de Espinosa
edo y para mas seguridad de que esto pastelero, y del engaño y error de la
era verdad el dicho fray Miguel en pre dicha monja en lo espresado y referi
sencia de la dicha monja, se postró en el do, y el dicho fray Miguel de los San
suelo y de rodillas, le besó la mano como tos reo acusado, no probó cosa ninguna
á tal rey don Sebastian que fingia ser, de que se pueda aprovechar para su
todo á fin para que ella se casase con descargo, dámoslo y pronunciámosla
él, como real y verdaderamente hizo por no probado, por lo cual y por lo
el dicho fray Miguel que cerca de ello demas que del proceso resulta, á que
cl dicho Gabriel de Espinosa le diese nos referimos, le debemos de declarar
cédula de promesa de casamiento con y declaramos por perpetrador de los
titulo y firma de rey en su presencia, dichos delitos sobre que ha sido acu
que entre ambos hubiese otras pala sado, y en su consecuencia le debemos
ras de promesa, como se hizo, con in de condenar y condenamos al dicho
tento todo de que á cierto tiempo el fray Miguel de los Santos en perpétua
dicho Gabriel de Espinosa con aquella deposicion sine ope restitutionis y por
falsa opinion, esforzada con los dichosla presente le deponemos , y privamos
medios y casamiento y con otros que perpétuamente de su hábito y oficio
iba tomando escribiendo á algunas per sacerdotal, y de todas sus órdenes ma
sonas poderosas del dicho reino de yores y menores, y de todas las gra
Portugal, como era vivo el dicho señorcias, esenciones, inmunidades, prero
rey don Sebastian y que le tenia casa gativas y privilegios que por razon de
do con la dicha monja, y que no se ellas y de cada una de ellas, y de su
queria manifestar hasta cierto tiempo, oficio, hábito y religion en que profe
y tratando de ir en persona al dicho só, debia y podia gozar y le pertenecia
reino de Portugal á asentar el dicho y podia pertenecer. E asimismo le con
trato para conseguir su intento con— denamos en que sea real y actualmen
moviendo el reino para ello, y confiado te degradado con las solemnidades re
en la mucha opinion y reputacion en quisitos acostumbrados de derecho
que estaba en él, se alborotasen los di por un obispo cuyo nombramiento en
chos reinos de Portugal para hacer rey nos reservamos, y que asi degradado,
de ellos á el dicho Gabriel de Espino— sea entregado al brazo seglar para que
sa, á fin de por este camino perturbar proceda contra él como convenga y ha
al rey nuestro señor la posesion justa llare por derecho. E asimesmo le con
que tiene de ellos, teniendo como te denamos en perdimiento de todos sus
EL FINGID0 REY DE PORTUGAL. 327

bienes que en cualquier manera tenga poder de sacrificar, consagrar y bauti


y le perienezcan, y podian pertenecer zar que recibió en la uncion de las ma
aplicados para la cámara, de S. M. y nos y de los dedos. -

gastos de justicia y costas de este plei Terminada esta terrible é imponen


to en que asimesmo le condenamos, cu te ejecucion de la sentencia eclesiás
ya tasacion en nos reservamos, y man tica, volvió fray Miguel á la sacristía,
damos, que esta nuestra sentencia sea y despojado de sus hábitos religiosos,
llevada á pura y debida ejecucion con cubierto con un raido ferreruelo negro
efecto, sin embargo, de cualquiera ape y una gorrilla en la mano volvió á pre
lacion que de ella se interponga por el sentarse al pueblo.
dicho fray Miguel, por cuanto asi con No pudo este menos de conmover
viene al servicio de Dios Nuestro Señor se al ver un hombre de su edad avan
y de Su Magestad y á la buena admi zada, con una venerable calva, y á
nistracion de justicia y por esta nues quien todos habian tenido hasta en
tra sentencia definitiva juzgando asi lo tonces por un hombre probo, austero
pronunciamos y mandamos.—El doc y virtuoso, reducido á tan deplorable
tor Juan Llano de Valdés. éstado.
Pronuncióse en Madrid á 16 de Condújole asi hasta la puerta de la
octubre de 1595 ante Francisco de iglesia el doctor Juan de Llanos Val
Santander, notario y secretario de su dés, y fuera de ella le esperaba el juez,
comision, y el dicho dia, mes y año, seglar, el alcalde de córte don Diegó
se lo notifiqué al dicho fray Miguel, Canal, rodeado de su ronda de algua
y apeló de ella, y sin embargo, se ciles. Fué entregado á éste, con la re
ejecutó luego esta dicha sentencia y comendacion que previenen los cáno
le degradó el mismo dia el arzobispo nes, de , que le mirasen con la mayor
de Oriston, y se entregó en hábito de benignidad.
seglar á el alcalde Diego de la Canal El mismo coche que le habia saca
que estaba presente, el cual le envió do de la cárcel como sacerdote, le vol
preso á la cárcel real de esta córte, vió á ella ya degradado. La degrada
adonde queda con las mismas guardas cion no habia sido mas que el terrible
qne antes tenia, en todo lo cual hubo preludio de la notificacion de la senten
un concurso de gente, y en fé de todo cia de muerte que al mismo tiempo ha
lo susodicho, lo firmo en Madrid á 17 bia dictado ya el juez civil. Asi es que
de octubre de 1595.—Francisco de al volver á la cárcel fué conducido al
Santander. cuarto que habia de servirle de capi
lla, donde se le notificó la sentencia
Inmediatamente que se terminó es de muerte en horca en la plaza Mayor
ta lectura llevaron á fray Miguel de de Madrid, precedido de un pregon
los Santos á la sacristía para revestir que en voz alta publicase sus delitos,
le con todos los ornamentos sacerdo cuya sentencia debia de verificarse el
tales, y procederá la terrible ceremo— dia 19 del mismo mes de octubre.
nia de la degradacion. El arzobispo Con resignacion y paciencia oyó
Doristan la verificó observando en todo fray Miguel aquella sentencia que es—
el ritual prevenido por la Iglesia ca peraba hacia largo tiempo; procuró ar
tólica para esta imponente circuns reglar las cosas de su alma, disponién
tancia. dose para comparecer ante la presen
Fué despojado el reo uno á uno de cia del Eterno Juez, aprovechando
los ornamentos sacerdotales de que no aquellos dos dias de vida que aun se
era merecedor; arrancó de su mano el le concedian.
cáliz y la patena, declarándole indig Pidió que le enviasen para conso
no, y separando de él la facultad que la larle en aquel terrible trance á dos
Iglesia le habia otorgado de ofrecer á padres de San Francisco, con los cua
Dios el sacrificio, y celebrar la misa les se confesó pasando en santas plá
por los vivos y los difuntos: raspó de ticas con ánimo tranquilo aquellas ho
su cabeza y de su dedo índice y pulgar ras terribles que debian precederá su
el óleo santo con que habia sido consa muerte.

grado, borrando con aquella rasura el El dia 19 vinieron tambien por


328 CAUSAS CELEBRES,
=e

mandado del juez para ayudarle á bien Comenzó en seguida á subir, soste
morir y acompañarle por la carrera, nido por los religiosos que le asistian,
ademas de los padres franciscanos que las escaleras de la horca. Cuando se ha
habia escogido, otros dos padres je llaba á la mitad de ellas, llegó corrien
suitas. do el notario de la causa, don Francis
Llegó el momento de la ejecucion, co de Santander, y un escribano, que
y con un recogimiento ejemplar clava de parte de S. M. le hizo algunas pre
dos sus ojos en un crucifijo que lleva guntas que no pudieron entenderse por
ba en sus descarnadas y pálidas ma ninguno de los circunstantes, empero
nos, marchó orando al Señor y alter notaban todos que contestaba á ellas,
nando en los salmos penitenciales con segun se podia observar por la anima
los religiosos que le asistian. cion de su semblante y el movimiento
Al entrar en la Plaza Mayor, que se de sus manos, aun cuando se hallaban
hallaba toda cuajada de gente, miró atadas, con brio, resolucion y ente
"cº ad.
con ojos tristes aquella inmensa con
currencia. Llegado al pie del patíbulo Creyeron todos que aun iba á dete
úsose de rodillas, haciendo lo mismo nerse la ejecuciou de aquella senten
os sacerdotes que le acompañaban. cia, que por tantas dilaciones y peri
Oró un instante; levántose despues, y pecias venia pasando. Se retiró el no
con la mayor firmeza, mas de la que tario; fray Miguel terminó de subir la
debia prometerse de su edad y de sus fatal escalera, el verdugo le echó el fa
padecimientos, con voz firme, emper o tal lazo al cuello, y apretando el reli
modesta y religiosa, dijo: gioso sobre sus labios el crucifijo que
tenia en las manos, fué lanzado en el
«La muerte que voy á sufrir la ten espacio quedando inmediatamente ca
ge merecida por mis culpas, y justa dáver. -

mente se me da; pero la mayor parte Casi por aquellos mismos dias mu
de los delitos que se me imputan no los rió en París, triste y abandonado de
he cometido. Gabriel de Espinosa me todos, don Antonio, prior de Crato.
engañó: realmente he creido que era el Asi es que con la muerte de este re
rey don Sebastian. Lo que he declara belde y la ejecucion de los autores y
do de don Antonio es falso, y si otra cómplices de la causa formada en Ma
cosa he dicho me la ha arrancado el drigal, no volvió á alterarse mas la
insufrible dolor del tormento.» quietud de Portugal en el resto del rei
nado de Felipe ll; el cual tambien, víc
Despues, alzando los ojos al cielo, tima de su antiguo padecimiento de la
esclamó con el mayor fervor: «Dios gota y de una fiebre ética complicada
mio, os ofrezco el sacrificio de esta con una hidropesía, vino á sucumbir á
muerte afrentosa; recibidla en des los tres años de este suceso, el de mil
cuento de mis pecados.» - quinientos noventa y ocho.
DON MARTIN DE ACUÑA,
COMENDADOR DE SANTIAGO,

CAPITAN DE ARCABUCEROS DE Á CABALL0 DEL REY FELIPE II.

(1595.)

Hemos llevado á nuestros lectores Ya hemos visto el estraño funda


al sombrío cubo del Obispo en la forta mento de esta jurisprudencia.
leza de Simancas, y los hemos hecho El rey era señor de vidas y hacien
asistir con horror á la secreta ejecu das. A él tocaba la administracion de
cion de uno de los principales magna la justicia: los tribunales, los procedi
tes de Flandes (1), vamos á hacerles mientos judiciales no eran considera
todavía presenciar otra ejecucion se dos mas que como medios de adquirir
creta en el castillo de Torrejon de Ve el conocimiento del hecho. Adquirido
lasco á cuatro leguas de Madrid, eje este de cualquier modo que fuese pro
cucion con notables y estraordinarias cedia la imposicion de la pena.
circunstancias. Asi Felipe II, convencido de la cri
Este modo tenebroso de proceder minalidad de don Juan Escobedo por
era muy del gusto de Felipe II. Antonio Perez, le mandó matar sin for
Hacia formar con el mayor sigilo macion de causa; asi sin defensa es eje
las causas, procuraba no se omitiese cutado en secreto el baron de Montigny
ninguna de las ritualidades del proce con las estrañas circunstancias que
dimiento, y solo se omitia , en ellas lo han hecho estremecer de horror á nues
mas principal, la garantía de seguridad tros lectores; asi en Gabriel de Espino
del reo, la defensa, fundado en que co sa, juzgado secretamente y tambien sin
municada la causa á los defensores, no defensa, su muerte en público es el
era fácil el obtener de ellos el secreto primer anuncio de su causa, porque asi
inviolable que se proponia, y tomando convenia á su política, y para acallar
or única defensa las declaraciones y la opinion que comenzaba á agitarse
confesiones del reo, hacia que por ellas en Portugal sobre la evidente existen
formase su conviccion el juez, ó mas cia del rey don Sebastian.
bien él mismo, que leia por sí todas El hombre que secretamente es
las causas, y apretaba ó modificaba trangulaba el verdugo en la torre de
las sentencias que le consultaban los Torrejon de Velasco, era un noble, un
jueces. valiente capitan que habia derramado
su sangre en las guerras de Flandes
(4) Pág. 219.—Causa del baron de Mon y en la conquista de Portugal, empero
tiguy que á pesar de la noble cruz roja
42
330 CAUSAS CELEBRES,
== =

Santiago que habia ganado en los cam-á la carrera de las letras.—Prometían


pos de batalla, la fatal pasion del jue se, y con fundamento, que en ellas se
go le habia llevado á cometer una villa distinguiria y aumentaria el lustre de
nía, y á descubrir en un momento su noble familia.
de error uno de los secretos mas gra La universidad de Alcalá de Hena
ves de la política de Felipe II. res era entonces una de las mas céle
La vida del hombre que el dia 17 bres de la Europa. Alli acudian á doc
de marzo de 1585 estrangulaba se trinarse en las ciencias y las artes los
cretamente el verdugo en Torrejon de jóvenes de las primeras familias del
Velasco, y cuya muerte permaneció reino. Alli fué enviado don Martin, y
entonces oculta y casi desconocida alli brilló por su aplicacion y sus ta
aun hasta hoy, pasaria por una intere lentos.
sante novela, si no estuviese apoya Distinguíase como una notabilidad
da por memorias y documentos de en la poesía latina. Su vida era de las
aquella época que nosotros hemos visto mas arregladas, y su trato mas íntimo
que existen entre los manuscritos era aun con los padres de la compañía
de la Biblioteca nacional de esta córte. de Jesus. No parecia sino que un se
Tan estraordinarios, tan prodigiosos creto presentimiento le arrastraba á la
son estos sucesos! intimidad de unos religiosos en los que
Triste espectáculo por cierto el de mas tarde y en los momentos en que
un noble, instruido, valiente, luchan su alma se habia de ver entregada á
do sin cesar con la fatalidad, y deslu la desesperacion, habia de hallar su
ciendo todas las brillantes cualidades consuelo.
por la pasion del juego, que le hace Su hermano don José, mientras él
abandonar por un momento las ideas estaba estudiando, se hallaba al lado
del honor y le precipita en un doble de sus padres, recibiendo la educacion
crímen de estafa y de traicion. que entonces se daba á los mayoraz
Terrible es la leccion, que encierra
gos, educacion de goces y de holganza,
la vida y el trágico fin del noble capi
y que fué la causa de que en nuestra
tan de arcabuceros de á caballo y co nacion brillasen mas principalmente
mendador de la órden de Santiago don en la Iglesia, en los tribunales y el
Martin de Acuña! ejército la clase del pueblo. Una grave
enfermedad puso á la muerte al here
dero del mayorazgo de Acuña. Parecia
perdida toda esperanza de su restable
cimiento. Sus padres llamaron enton
Fué don Martin de Acuña de noble ces de Alcalá á don Martin, en el que
orígen, hijo de un caballero de su mis veian ya el sucesor de su mayorazgo,
mo nombre que habia servido constan y el continuador de su noble familia.
temente en el palacio del emperador —Marcha éste á Madrid, si bien pesa
Cárlos V á quien habia acompañado en roso con la inminente pérdida de su
sus gloriosas espediciones militares, y hermano, gozoso de trocar los hábitos
del que habia recibido en diversas oca y la vida de estudiante por la de la
siones señaladas muestras de su genero córte abandonando los estudios áridos
so afecto. Casó con una dama de la em - de la filosofía y teología, por los caba
peratriz, jóven de las mas distingui llos y las armas, y haciendo en su ju
das por su belleza y talento. venil imaginacion mil castillos en el
Tuvo varios hijos, el primogénito y aire, mil proyectos de un risueño por
destinado á perpetuar la sucesion de Venl I".
su noble casa, fué don José Acuña, y Todas sus ilusiones debian desva
el segundo don Martin, que es el prota necerse como el humo. Cnando se creia
gonista del triste drama que vamos á ya heredero, se encontró al llegar con
presentar á la vista de nuestros lec que su hermano, habiendo hecho crisis
tores. su aguda enfermedad, entraba en la
Las felices disposiciones de inge— convalescencia. En vez de asistir á un
nio, la viveza y despejo de don Martin entierro que le aseguraba la ¿?
hicieron que sus padres le dedicasen en el mundo, asistió á la deliberacion
DON MARTIN DE ACUÑA. 33l

que formaron sus padres de estable mano don José, y le intimó su decidi
cer á su hermano casándole en cuanto da voluntad de abandonar la carrera
estuviese bueno con su prima herma literaria, y de dedicarse á la de las ar
na doña Juana de Acuña, á cuyo obje mas, á que le llamaba su genio ardien
to solicitaron del papa la correspon te, y su arrojo.
diente dispensacion del parentesco. Wió su hermano que eran escusa
Cerráronse las puertas á las espe das las razones y la persuasion con
ranzas de don Martin. El que antes se don Martin, y trató de proporcionarle
dedicaba voluntariamente al estudio, con las buenas relaciones que habia
tenia ahora que dedicarse á la fuerza. tenido su padre, un empleo en que
Dormia hasta entonces en su corazon pudiese dar espansion á su genio au
la ambicion y la codicia, habia venido daz y emprendedor.
á despertarlas de un modo fatal la en Ardia entonces en todo su furor la
fermedad de su hermano, y no á sa guerra en las provincias de Flandes:
tisfacerlas. Habia entrevisto un por esas guerras terribles que diezmaban
venir lisongero de felicidad, y este todos los dias los tercios españoles, y
orvenir lo habia disipado el recobrar en que habia ocasion de dar todos los
a salud un enfermo, y lo alejaba mas dias estocadas y cintarazos. Ningun
aun un matrimonio, que llenaba de teatro podia convenir mejor á don Mar
gozo la familia de los Acuñas, y de una tin Acuña.
gran envidia y pesar á su alma. Fué alli destinado, se halló en to
Volvió á Alcalá de Henares don das las funciones principales de guer
Martin, empero no era ya el jóven es ra que alli hubo, y se portó como no
tudioso, el que se distinguia entre los ble, porque la sangre obliga, pero con
mas aventajados de aquellos escolares, tinuó con la pasion fatal del juego.
el que formaba sus delicias en el trato Alli á la vista del mismo duque de Al
de los hombres graves, y prudentes ba hizo sus pruebas de valor, y en po
religiosos. Abandonó los ir comple co tiempo fué promovido á capitan de
tamente, se dedicó al juego, y se en una compañía de arcabuceros de á ca
tregó con frenesí á esta loca pasion, ballo. -

que debia un dia acarrearle la infamia Cuando en 1580 el mismo duque de


y la muerte. Alba, que á su vuelta á España habia
Rodeado de tahures, era su casa el sido preso en su palacio de Uceda, sa
punto, donde se reunian los jóvenes lió de alli para ir casi encadenado á
mas viciosos. Ni las amonestaciones de conquistar para Felipe II el reino de
sus maestros, ni los consejos de su an Portugal, don Martin Acuña marchó
ciano padre, á quien aquellos dieron á aquella gloriosa espedicion, y alli se
aviso de la mala conducta de su hijo, halló con su compañía en Santaren
bastaron para corregirle.—Su pº y con los vencedores entró en Lisboa.
iba ya á poner severo remedio á tanto Mas de una vez el anciano y glorio
desorden, cuando le sorprendió la so vencedor de Mulberg y de Lisboa
muerte, acelerada quizá con las pesa estrechó, admirando su valor, la mano
dumbres le diera su mal hijo. del noble capitan de arcabuceros.
No tardó muchos dias en seguirle Terminada la espedicion de Portu
al sepulcro la madre de don Martin, gal, aumentado con este floron la co
pobre señora, viéndose sin poder pa rona de dos mundos con que ceñia su
ra contener los escesos de su hijo, frente Felipe II, el monarca mas pode
y acongojada con los dolores de su roso entonces del mundo, se deshizo
viudez. el ejército que habia llevado á cabo
Muertos sus padres, roto el único en tan pocos meses tan grande em
freno que aunque en la apariencia se presa.
veia obligado á respetar, abandonó los Los capitanes se volvieron á sus
estudios que en realidad hacia tiempo ordinarias residencias, y los que no
habia dejado, colgó los hábitos, como las tenian fijas se tornaron á sus casas.
se decia entonces, salió de Alcalá don Entre estos estaba don Martin.
de tan mala fama habia dejado, de qui Sus servicios fueron premiados por
merista y tahur, se presentó á su her el rey con un hábito de la órden de
CAUSAS CELEBRES,
====

Santiago, y una encomienda de dos mil Llegó á San Lúcar de Barrameda, y


ducados. se embarcó en las galeras de España.
Volvió don Martin con tan noble y El general que las mandaba le admitió
¿ recompensa á la casa de su en su consejo, pues sabia que á su gran
ermano don José, el que deseando ver valor reunia don Martin un gran en
si podia hacer que don Martin hiciese tendimiento y grandes conocimientos
una vida mas arreglada que la que en el arte de la guerra.
acostumbraba á llevar en los campa Entonces el célebre pirata Uluch
mentos, y permaneciese quieto y so Ali, virey de Argel, corsario famoso
segado en la córte, le propuso el ma entre los turcos, con una escuadra re
trimonio de una señora de Aragon lla corria las costas del Mediterráneo, y
mada doña Mencía de Piamonte que se hacia frecuentes desembarcos en los
hallaba en la córte siguiendo un pleito puntos de las playas de Valencia, ta
de mayorazgo de gran cuantía, en cuya lando los campos, saqueando los pue
prosecucion habian muerto sus padres, blos y cautivando á sus habitantes, y
y que ella huérfana continuaba con llevando el terror y la desolacion por
grandes esperanzas de buen éxito. todas partes.
Era doña Mencía hija de padres Siguiendo el parecer de don Mar
muy distinguidos, iba á ser inmensa tin, se aprestó á perseguirle con sus
mente rica fallado que fuese en su fa galeras el general español esperando
vor el pleito del mayorazgo que dis reprimir la ferocidad de aquel corsa
putaba. Era por estremo discreta y rio que ensoberbecido y orgulloso con
prudente si bien poco agraciada en su las grandes presas y muchos cristia
rOStrO. nos que habia hecho, amenazaba, no
Casóse don Martin con ella y vivió solo atacar los puertos y puntos marí
dos años siguiendo con afan el pleito timos, sino penetrar en el interior.
en que se cifraban todas sus espe Destinó el general á don Martin pa
ranZaS. ra que con dos compañías se adelanta
La fatalidad le perseguia: debia don se á hacer un reconocimiento y saber
Martin siempre ver desaparecer las donde se hallaban los enemigos en una
riquezas que con tanto afan buscaba galera tripulada con cien ligeros reme
al hallarse de tocarlas. Se fa ros, encargándole que hecho el reco
lló el pleito del tan contravertido ma nocimiento se replegase al grueso de
yorazgo: por su desgracia, ó porque no la escuadra.
tenia el derecho, fué adjudicado el ma A poco tiempo de apartarse de ella
yorazgo á su contrario. don Martin, cerca del amanecer, tuvo
Don Martin se quedó pues pobre, que hacer frente á un temporal tan re
arruinado con los gastos del litigio, cio, que separándole mas de lo que era
perdió hasta la esperanza de ser rico, su propósito de las demas galeras no
se hallaba casado y con dos hijos que pudo ejecutar su empresa, ni el gene
habia tenido durante los dos años de ral favorecerle en su infortunio.
su matrimonio. Dos dias duró la tempestad, y dos
No tenia mas que su espada, no dias tuvo que luchar con los elemen
contaba con mas recurso que su valor tos, sin saber á qué parte le habia ar
personal para sostener las cargas de rojado, esperando una muerte cierta,
su matrimonio, asi es que de malísima Al tercer dia, serenado el cielo, al
gana, y cual si su corazon le hiciese amanecer descubrió las galeras del
presentir los trabajos y desventuras corsario enemigo: los vientos le im
que sobre él iban á caer, se vió preci pelian hácia ellas. Era inevitable su
sado á hacer sus caravanas en las ga pérdida.
leras de España por valerse á lo menos Con toda la priesa posible, con toda
de su encomienda. la actividad que da la desesperacion y
Abrazó á su muger y á sus hijos, la presencia del peligro, hizo que sus
despidiéndose de ellos con el corazon remeros, casi estenuados de cansan
desgarrado de dolor. Era buen esposo, cio y de remar dos dias seguidos, vi
y buen padre, aunque fuese lo que el rasen de bordo, volviesen la espalda á
mundo llama un calavera. las galeras enemigas viendo que en
DON MARTIN DE ACUÑA. 333
- -
3 = -

ello consistia la vida y libertad de to empresas guerreras, que una cautiva


dos cuantos con él iban. El mismo don de rubios cabellos, de blancas y son
Martin les dió el ejemplo remando co rosadas megillas é interesante mirada.
mo el mas ínfimo galeote. Amurates III habia sucedido en el
La desgracia perseguia á don Mar trono de los Osmanlis á su padre Se
tin. Uluch-Ali desde la galera habia lin II en 1575. Su primer mandato fué
descubierto la embarcacion de los cris el hacer estrangular á sus cinco her
tianos. Veíala sola, aislada, era una manos de tierna edad. Aunque en
presa fácil y demasiado importante tiempo de su padre habia en 1571 que
para que no la diese caza. dado humillado el poder naval de la
Persiguióla, y en breve llegó á po Turquía en la célebre batalla de Le
nerse á tan corta distancia de ella, panto, el corsario Uluch-Alí que habia
que viendo don Martin que le era for combatido en aquella memorable ac
zoso hacerle frente, se determinó pro cion, y que atacando el cuerpo derecho
curando infundir ánimo, y hacer adop de la escuadra española, habia llegado
tar igual desesperada resolucion á to hasta apoderarse de diez galeras cris
dos sus compañeros á morir matando tianas, pudiendo escapar cuando vió
y defendiendo su vida y su libertad. aquella derrota terrible de la media lu
Era un combate demasiado desigual na con un gran número de sus galeras,
el de una galera desmantelada por la continuaba devastando las costas de
tempestad, con su tripulacian rendida España, burlando las escuadras de Fe
de fatiga, contra tres galeras con chus lipe II, interin escarmentado el Gran
ma descansada y fuerte. Turco, convertia todas sus fuerzas á
El combate fué terrible, empero de hacer la guerra á los persas.
pocas horas. Uluch-Alí habia hablado con don
La galera cristiana fué vencida, y Martin, y habia conocido su brillante
don Martin con todos los soldados que ingeniº
le habia visto menear los bra
dentro iban heridos y cautivos. zos y blandir el acero durante el abor
Estaba Uluch-Alí tan cargado de dage de la galera, y se le iban los ojos
las ricas presas que por todas las cos tras de él, como se van los de todo va
tas de España habia hecho, que ¿ liente tras de otro valiente.
diendo llenar sus galeras con mas des Conocia que una de las preseas que
pojos determinó dar la vuelta á Cons podia ofrecer al sultan Amurates, co
tantinopla con el objeto de hacer un mo fruto de sus gloriosas correrías era
rico presente al Gran Señor. el jóven cautivo, capitan de la galera
Iban atestadas sus galeras de los apresada.
objetos preciosas que habia saqueado Llegó Uluch-Alí triunfante á Cons
en sus correrías. Las ricas sederías, los tantinopla. Hizo con toda sumision al
¿ brocados, las alhajas de per sultan el espléndido presente que se
s, constituian gran parte de su car habia propuesto, el que recibió éste
amento. Tambien habia trasportado á con grandes muestras de gratitud, no
ordo de sus galeras caballos admira solo por lo rico que era, sino tambien
bles de raza, y una multitud de lindas por la voluntad que al mismo tiempo le
niñas, galas de los campos , de Valen mostraba de volverse inmediatamente
cia, cristianas doncellas de las que á correr las costas cristianas y hacerle
parte destinaba á los harenes de Cons— de las presas que recogiese nuevos
tantinopla y parte á los mercados de servicios, estimándole sobre todo el
esclavas del Asia. cautivo, al que á pocos dias de haber
De tan ricas mercaderías podia es lo tratado, agregó á su inmediato ser
coger un buen regalo para el Gran Se vicio, pues llegó á conocer aquel inte
ñor. Uluch- Alí conocia bien su carác— ligente sultan todo el valor de ánimo
ter. Amurates IIl era un hombre que y singular ingenio de aquel valiente,
amaba á los hombres valientes y en á quien el capricho de la suerte habia
tendidos, y saciado de los placeres fá reducido á la esclavitud.
ciles del serrallo apreciaba mas un Propúsose muy pronto el sultan sa
buen cautivo, gallardo, inteligente y car á don Martin de tan triste estado,
de valor que pudiese servirle en sus de tan humillante condicion.
334 CAUSAS CELEBRES.
= =e

De tal modo fué don Martin ganan servicio y la gratitud que debia tener
do la voluntad del sultan, que para ser le seria un poderoso medio para apar
uno de los mayores privados suyos no tarle de la fé cristiana, y mas si con
le faltaba sino abjurar de la fé cristia las seducciones de la hermosa oda
na y tomar el turbante. lisca se habia llegado á interesar su
En varias ocasiones se lo insinuó COraZOn. -

Amurates que queria aprovechar para Concertóse la ficcion, pero como es


la utilidad de su gobierno las bellas una verdad inconcusa como ha dicho
cualidades de su cautivo favorito. uno de nuestros poetas antiguos, de
Don Martin habia nacido noble y que no hay burlas con el amor, ni que
cristiano, y don Martin permaneció fiel se debe jugar con fuego, como ha di
á su religion y á su rey. cho otro de los modernos, sucedió
En medio de sus desdichas tenia que lo que la odalisca habia comen
don Martin una gracia, era un hombre zado por obediencia, lo continuó des
tan simpático, que ninguno le veia y pues por aficion, que las ternezas que
le trataba que no se le aficionase luego, comenzó á mentir su boca, salieron
y asi, no solo era grata su conversacion despues verdaderas y ardientes del
al sultan, sino tambien, lo que es mas corazon, y que al cabo de pocos dias
estraño, á todos los ministros, miem vino á quedar la bella seductora tan
bros del divan y bajaes, en quienes seducida y tan rendida al amor de don
pudiera obrar la envidia por las dis Martin que siéndole de importancia
tinciones y privanzas que dispensaba guardarle el secreto, le descubrió todo
Amurates á su esclavo, por las sospe— lo que el sultan con ella habia concer
chas fundadas qae tenian de que tra tado con el fin de hacerle morir si
taba de elevarle á los mas altos cargos hallándolos juntos no la tomaba por
del imperio, atendido el designio que muger.
tenia de hacerle adoptar el isla Grande fué el asombro de don Mar
mismo. tin al descubrir la trama que le reve
Queria demasiado Amurates á su laba aquella apasionada muger. En lo
esclavo, era ademas bastante enten que no veia mas que un frívolo pasa
dido para comprender bien que la fuer tiempo, vió todo un peligro. Procuró
za abierta no basta á sojuzgar la opi evitar en lo sucesivo todo trato con la
nion y hacerla abandonar á un hombre muger á quien debia tan precioso aviso,
noble y valiente. si bien se lo agradecia, y sentia por
Quiso pues conseguir por la astu ella el mayor afecto.
cia lo que creia no habian de arrancar La odalisca estaba enamorada de
las amenazas directamente. veras, y no podia sufrir aquellas au
Trató de hacerle caer en un gran sencias ni por disimulo, y asi cono
delito, que mereciese la pena de muer ciendo el daño que ella misma se ha
te, y de la que él mismo no pudiese bia hecho, para conseguir su intento
absolverle y darle por libre, si no ha se comenzó á quejar de su ingratitud,
cia lo que tantas veces le habia ro llamándole enemigo, que aventurán
gado. dolo todo ella por él, no correspondia á
Persuadió á una de sus odaliscas, su voluntad.
de las muchas y muy hermosas que Don Martin que conocia todo el pe
habia en su harem; (algunos han que ligro que habia de un momento á otro
rido suponer que era una hija suya)á en aquella conversacion permanecia
que procurase con amoroso afecto y firme dueño de sí mismo. Cuantas mas
con halagos inspirarle una pasion, para señales daba la odalisca de amor, mas
ue arrastrado de esta y proporcionan insensible y duro parecia el cristiano
¿ hábilmente el medio, concertase cautivo.
el verse juntos, y sorprendiéndole el Amurates que andaba ya descon
sultan, pudiese por este delito ame. fiado de hallar mejor ocasion, que ha
nazarle con la pena de muerte, y va bia visto la imperturbable continencia
liéndose de generosidad y en gracia de su esclavo favorito, y que atribuia
del afecto que le profesaba, hacerle á su lealtad, entró donde estaban los
casar con ella, pareciéndole que este dos acompañado de su ministro Osmin
DON MARTIN DE ACUÑA, 336
====

y de otros dos, bajaes, y fingiendo riosas pruebas en los campos de Flan


sorpresa de hallar á su esclavo con des y de Portugal. A esas notables cir
una de las mugeres del harem, y llena cunstancias reunia la de un talento
de lágrimas, aparentó enfurecerse con rodigioso para hablar con la mayor
tra don Martin. acilidad y perfeccion todos los idio
Con afectada indignacion le recon mas. En el tiempo que habia estado en
vino cómo siendo un vil esclavo in Constantinopla habia aprendido la len
grato á sus beneficios habia osado al gua persiana con tal soltura y propie
zar sus ojos á una de las mugeres de dad que podia para los que no le cono
su serrallo, y por un esfuerzo de su co cieran pasar por un persa. Aprendió
razon generoso quiso aun perdonarle ademas al mismo tiempo la lengua tur
á él y á ella de la pena de muerte en ca, hablando estos dos idiomas con el
que habian incurrido ambos mandando latino y griego que habia aprendido en
que se casasen. la universidad de Alcalá, como el cas
Aunque turbado don Martin al pa tellano.
recer, en breve se repuso y defendió No quedaba garantía alguna al sultan
con poderosas razones su inocencia, de que Acuña cumpliria fielmente la
rotestó de su amor al sultan su bien importante comision que á su celo y
echor, le ofreció su vida, si de su sa saber se fiaba mas que su palabra.
crificio era gustoso, pero se negó deci Teníale por un cumplido caballero,
didamente á casarse con la odalisca y estaba ademas entonces tan acredi
porque estaba ya casado en su pais, y tada la lealtad castellana, se habian
porque á ello se nº la fé del cris dado tan altos ejemplos de ella, que el
tianismo que estaba resuelto á conser sultan se contentó con la palabra que
vará todo trance, y á costa de su vida. le exigió y prestó Acuña de volver á
Habló de tal manera como noble y Constantinopla.
como caballero valiente, que Amura Grandes fueron las mercedes y re
tes III, que sabia bien su inocencia, compensas que le ofreció el sultan pa
que conocia sus prendas, y su decidi ra su vuelta, ademas de concederle su
da adhesion á su persona, de la que libertad , si queria volver á su pais.
se proponia sacar gran utilidad, apa Agraviado estaba don Martin al ver el
rentando dejarse llevar de una gene poco celo que el rey, en cuyo servicio,
rosidad poco comun en los turcos, y batiéndose denodadamente, habia
no insistió en su proyecto de hacerle sidº hecho cautivo, ponia en su rescate
abjurar del cristianismo, y le conce y el abandono en que le dejaba su her
dió su perdon, exigiendo de él la pala mano don José y su esposa, si bien dis
bra de que en adelante miraria mas culpaba generosamente á ésta por la
por su servicio. miseria en que sabia hallarse con sus
Amurates III, viendo cuan desgra desgraciados hijos.
ciada habia sido la suerte de las ar Martin conocia los deseos del sul
mas en tiempo de su padre Selin II en tan, sabia que necesitaba un hombre
sus espediciones contra la cristiandad, decidido, fiel, é inteligente en Persia,
se habia decidido á hacer la guerra á y se prestó á tan arriesgado servicio,
la Persia. Habia mandado á su visir Si sin mas garantías, como hemos dicho,
nan-Bajá alli con un poderoso ejército. que su palabra.
Deseaba Amurates tener noticia de Don Martin atraviesa las regiones
sus designios, de los proyectos, de los que separan á Constantinopla de Persia
recursos de sus enemigos, del estado y salva con su valor y prudencia todos
situacion de sus plazas fuertes. Fijó los peligros que le rodean, penetra en
su eleccion para tan delicada comision Persia, llega á Tauris, tómanle todos
en don Martin de Acuña. por un natural de aquel reino, exami
Ninguno era mas á propósito que él na las plazas principales de guerra, es
una empresa en que se necesita tudia la organizacion de los ejércitos,
gran valor é inteligencia. Don Mar procura conocer los proyectos, los re
tin conocia el arte de la guerra: le ha cursos de los persas, y vuelve enrique
bia aprendido en la escuela del gran cido con preciosos datos y notables no
duque de Alba, habia hecho sus glo ticias á la presencia de Amurates, ha
336 CAUSAS CELEBRES.
-
===== -

biendo pasado antes por el campamen Don Martin, á quien el trato fre
to del visir Sinan-Baja. Aquel general cuente y la intimidad habian acostum
admira en él no solo un fiel espía, sino brado á hablar con libertad á su se
un consumado capitan, cuyos acertados ñor, le contestó que no sabia si era
consejos siguió. mayor la confianza qne de él hacia, ó
Asi es que ¿ tres provin la mala opinion que de él tenia al fiar
cias, y se apoderó de la ciudad de Tau le un negocio tan árduo y , que dere
ris, importantísima plaza fuerte, en chamente iba contra las leyes de la
donde ¿ residido algunos meses lealtad que los nobles deben de guar
estudiando sus fortificaciones el capi dar á sus reyes, encomendándole una
tan don Martin Acuña, cuyas indica cosa propia de un traidor. Le hizo ver
ciones sirvieron de mucho cuando des que en la comision de Persia en que
pues fué á sitiarla Sinan-Bajá. tan bien le habia servido, no obra
Amurates recibió á su esclavo fa ba contra su rey y señor natural, y
vorito con las mayores demostraciones que entonces la obligacion y lealtad
de afecto, hízole muchas mercedes, y le forzaban á servirle sin faltar á su
satisfecho del talento con que habia nobleza: empero que ahora, , si á pe
desempeñado su difícil comision, se sar del afecto que le profesaba, y del
propuso utilizar la misma libertad que absoluto imperio que sobre él tenia,
tenia que darle y que era la recom admitia tal propuesta el mismo, no po
pensa ofrecida de los recientes ser dria menos de mirarlo como un trai
vicios. dor á su rey, digno de desprecio, y que
Llamóle un dia, y le notició que era le daria razon á sospechar que tambien
libre en volverse á España en cumpli lo seria con él.
miento de su promesa, pero que él Weia don Martin que corria el ries
queria fiar de su celo una grande em ¿ de perder su apetecida libertad, si
presa, aunque no sabia si aceptaria su ecididamente se negaba, y asi es que
desempeño. á pesar de estas razones, continuó su
Arrojóse á sus plantas don Martin, plicándole que le diese algun breve es
y le aseguró que aunque no fuese aun pacio de tiempo para pensar el grado
su esclavo, vendria de España cuantas de infamia que sin duda iba á acarrear
veces le necesitase para consagrarse á su linage, orque en cuanto á su
en su obsequio y servicio, y arriesgar propio daño él no reparaba, y que de
su vida en cuanto le mandase, con tal seoso de servirle necesitaba meditar
que no fuese contra la ley cristiana el cómo podria hacerse, pues, el pro
que estaba resuelto á guardar y pro meter cosa de tanta gravedad ligera
fesar hasta el último suspiro de su mente, demostraria poca voluntad en
vida. cumplirla, y él sabia por reciente es
Agradeció mucho Amurates la de periencia, que cual noble y caballero
cision que por él mostraba don Martin, era esclavo de su palabra.
y poniéndole la mano sobre la cabeza Satisfecho quedó Amurates con es
en señal de amor, le dijo: que lo que ta cuerda, hábil y astuta propuesta de
ueria hacer con él era dejarle marchar don Martin, y el verle tan escrupuloso
libre á España, donde le haria merce en estos puntos de deslealtad, le ha
des y le daria dinero para que no se cia confiar mas en él, y pensar que
apartara de su servicio, y para que con no le engañaria despacio el que de pri
la buena maña é inteligencia que ha sa y de pronto no se determinaba á
bia demostrado en la comision que ha hacerlo, ¿ le dijo que lo pensase;
bia desempeñado en Persia, ¿ porque él sabia que habia de estarle
lo mismo en la córte de Felipe II, lo bien y serle muy provechoso.
que le seria mas fácil con sus buenas Quedó alegre don Martin al ver
relaciones, para que le tuviese secreta el camino que se le abria para poder
mente al corriente de los planes que volver á España y recobrar la liber
tuviese el rey, de las determinaciones tad tan deseada, pero le atormentaba
de los consejos. Exigió Amurates de la empresa en que queria comprome
don Martin una contestacion franca y terle el Gran Señor, y resuelto como
libre. noble á no faltar jamás á su rey ni
DON MARTIN DE ACUÑA. 337
s-a

vender la causa de la cristiandad por causa de este consejo: Robledo per


mas mercedes y oro que le prodigase maneció inflexible dueño de él, ofre
el sultan en España, se propuso apa ciendo revelárselo en tiempo opor
rentar condescender con los designios t. Un O.
de Amurates hasta salir de su cauti Don Martin se presentó al dia si
verio. guiente á Amurates y le manifestó se
Necesitaba don Martin esplayar su hallaba pronto á obedecer y á entrar en
ánimo con alguno, y consultar con él tratos con él, pero le suplicaba se hi
negocio de tanta monta. ciese la negociacion por medio de Os
Entre los cautivos que habia hecho IIld In .
Uluch-Alí en la galera que mandaba Contento accedió á esto el sultan,
don Martin en las costas de Valencia, haciéndose el concierto de que don
habia un soldado llamado Alonso de Martin serviría en España los intere
Robledo, con el que tenia grande amis ses del Gran Señor señalándole éste
tad el capitan, ya porque era un va por recomponsa la cantidad de cequies
liente, ya por ser un, tahur como él. que él graduase cada año.
El vicio del juego hemos dicho que Terminado el trato y aceptado el
era dominante en don Martin. compromiso, volvió don Martin á ver
Al mismo tiempo que Uluch-Alí á su amigo Robledo para preguntarle
presentaba al sultan como un regalo la causa, porque para asegurarse de
precioso al cautivo don Martin; el sol que no le engañaban, le habia acon
dado Alonso Robledo era vendido co sejado que pidiese al sultan mediase
mo esclavo á un poderoso bajá llama Osman en los tratos.
do Osman, gran privado de Amura Robledo que veia terminado el ne
tes III y de su consejo. - gocio y comprometido á don Martin,
Si el sultan, como hemos visto, ha le manifestó que el favor y la privan
bia hecho de su cautivo don Martin un za que con su amo Osman tenia era tan
favorito, casi un amigo; por un capri ta que le habia llegado á descubrir al
cho igual de la suerte lo mismo habia ver lo decidido que era por el rey don
sucedido con Osman y su esclavo Ro Felipe, que se hallaba subvencionado
bledo. por éste, de quien en varias ocasiones
Asi es que don Martin de Acuña y habia recibido mercedes y grandes can
Alonso Robledo eran esclavos solo en tidades, porque en los negocios del
el nombre, pero continuaban vién Divan ó consejo del Gran Señor rela
dose cuando querian como amigos an tivos á España le había dado algunos
tiguos, y siempre que se hablaban tra avisos importantes, hallándose en pro
taban de los medios de poder conse pósito de continuar sirviéndole asi en
guir un dia su libertad. adelante.
Con Alonso Robledo fué don Martin Le aseguró que el haberle aconse
á consultar el apurado trance en que jado de que Osman interviniese en es
se hallaba y la propuesta que le hacia te asunto lo habia hecho con el fin de
el sultan. cerciorarse de que no habia engaño
Comenzaron á reparar en la caute alguno de parte del sultan, porque
la con que procedia el sultan y recela cuando su amo le habia descubierto
ron no fuese alguna prueba que quisie un secreto tan grave como el estar en
se hacer de su lealtad. correspondencia con el rey de España
Habia gran rato que los dos estaban mejor le descubriria lo qne no impor
discurriendo sobre este asunto cuan taba tanto.
Robledo propuso á don Martin que Habia calculado para que en ningun
hiciese, porque importaba mucho á la tiempo sufriese mancha el honor de
seguridad del negocio, que el sultan don Martin ni se le sospechase de trai
tratase , con él estas cosas por medio dor, hacer de Osman un buen testigo
del bajá Osman su amo, y que él le de abono para que Felipe II estuviese
diria despues la razon que para acon cierto de que jamás le habia ofendido.
sejarle esto tenia. Pensaba que las cantidades que
En vano lleno de curiosidad insis el sultan diese á don Martin las po
tió don Martin en querer penetrar la dria guardar o" para sí, y él cobra
338 CAUSAS CELEBRES,
=

ria del rey¿ II el dinero con que á su simpático carácter y al favor del
se recompensaba á Osman por sus sultan, se habia grangeado en Cons
avisos, guardándolo en equivalencia de tantinopla.
lo que el sultan diese á Osman para Abrazó al bajá Osman en quien
remitirá Madrid. mas que un amigo tenia un cómplice
De esta manera estableció Robledo para servir los planes del rey de Es
una especie de giro para el cambio paña, y dejó ajustado con él el resca
de cantidades, cambio difícil en aque te de su amigo Robledo, de quien se
lla época y en un negocio tan secreto despidió tiernamente bien ageno de
de suyo. que éste habia de ser providencial
Asi combinaba el que quedase bien mente el instrumento fatal de su per
servido el rey Felipe II con los avi dicion.
sos que Osman le diese, mientras que Contento salió en un buque italia
don Martin debia engañar al sultan en no que se hallaba en la rada de Cons
treteniéndole con noticias vulgares y tantinopla y despues de una feliz na
de poca importancia. vegacion desembarcó en las playas de
Admirable y bien concertado le pa Barcelona.
recia á don Martin el plan de Robledo, Besó agradecido al cielo la tierra
á quien abrazó agradecido llamándo de su patria, y sin perder un momen
le su mas fiel amigo y dándole á ins to tomó el camino de Madrid.
tancias suyas su palabra de que en lle Alli sorprendió agradablemente á
gando á España ninguna cosa solicita su muger, á sus hijos y á su her
ria primero que su rescate, y ofrecién mano.
dole que el rey le haria merced por Trabajando estaba éste en conse
sus buenos servicios. guir su libertad, lo que no habia po
Fuéronse despues los dos amigos ido verificar antes falto de recur
á tratar con Osman el modo y forma sos, porque habia sufrido un grande
con que habian de comunicarse, fingien descalabro en la fortuna del mayoraz
do don Martin que tenia una carta del go que heredara de sus padres, y por
rey don Felipe II en que le prevenia que habia tardado muchos años en sa
que en tanto que se hallaba en Cons ber de su paradero.
tantinopla procurase tener á su devo Acudian los amigos y antiguos com
cion al bajá Osman y que le ofrecie pañeros de armas y de juego de don
se grandes recompensas Martin á quien no se cansaban de ad
El crédulo turco cayó en la red mirar y contemplaban como un ser
que hábilmente le habian tendido aque vuelto de otro mundo despues de seis
llos dos tahures que á la vez que á él años de cautiverio.
le engañaban, no obstante, su grande Don Martin despues de recibir los
é íntima amistad, se hallaban dispues plácemes, las enhorabuenas de sus ami
tos á engañarse y venderse recípro gos, fué á palacio á ver al rey Feli
camente. pe II, llevando muy bien pensado lo
Osman acabó de declararse franca que le debia de decir de los concier
mente con ellos dando cuenta á don tos que dejaba hechos con el bajá.
Martin de algunas cosas para que las Felipe II tenia el don particular de
revelase al rey de España y. entregán los reyes, la memoria de las personas.
dole una carta escrita en cifra. Recordóle al verle, le recibió afable:
Bien encaminadas iban hasta en le oyó con gran atencion y gusto las
tonces las cosas de don Martin de estraordinarias aventuras de su cau
Acuña. tiverio.
Despidióse éste del sultan Amura Habló al rey de la gran decision
tes III en quien habia encontrado un que tenia por su servicio el bajá Os
amigo, un decidido protector y de man y diestramente como hombre de
quien al marchar protestó ser un fiel talento, le insinuó que debia hacerse
servidor, no omitiendo para ello ni alguna merced para alentarle á que se
promesas ni juramentos. conservase en su buen propósito, por
Antes de marchar fué tambien á que por medio suyo se podrian tener
yer á los muchos amigos, que gracias avisos de todas las cosas secretas que
DON MARTIN DE ACUÑA. 339
-º ==

se tratasen en el divan de Constanti Un dia falto de todo quiso desqui


nopla y al mismo tiempo como eviden tarse, jugó los tres mil ducados que el
te muestra de esta verdad le entregó rey le habia dado para Osman y el res
al rey un memorial ó carta escrita en cate de Robledo.
cifra convenida con el rey, en la que Aquellos tres mil ducados fueron
despues de hablarle de varios asuntos á hundirse en el abismo sin fon
y despues de grandes ofrecimientos se do que habia devorado toda su for
remitia á lo que don Martin le refi tuna.
riese, puesto que con él se habia en Tras estas grandes pérdidas pro
tendido y conocia, éste su celo y vo curó perder tambien la memoria de sus
luntad en su servicio. obligaciones, olvidándose de Osman,
Tomó el rey aquellos papeles pa de su amigo Robledo, de la confianza
ra leerlos por sí mismo como hacia que el rey habia hecho en él entregán
en todos los de los negocios del Es dole aquel dinero.
tado y las consultas de sus consejeros. Procuraba acallar el grito del ho
Importantes debieron de ser los avi nor y de la conciencia con la idea de
sos que Osman le daba, porque aun que por la gran distancia no se sabria
que hasta hoy no han podido entender nada en Constantinopla y que le seria
se por la reserva con que entonces to fácil cumplir con el rey cuando le pre
do se manejaba sirvieron para dar guntase por aquel dinero, diciéndole
concepto y crédito á don Martin en la que ya lo habia enviado.
opinion de Felipe II, que ya le conocia Pasóse algun tiempo, y cuando ya
personalmente antes como un noble y don Martin habia olvidado casi su in
buen caballero, capitan valiente, á fame proceder, cuando se reputaba mas
quien, como hemos dicho, habia pre tranquilo, se encontró sorprendido al
miado por sus servicios en la guer ver que de Constantinopla, habiendo
ra de Portugal con una encomienda de sabido no se sabe por donde, que el rey
Santiago. Felipe II le habia entregado aquellos
Asi es que desde luego mandó Fe tres mil ducados, Osman le reclamaba
lipe II entregarle tres mil ducados pa su dinero, y Robledo le reprendia la
ra que los dirigiese á Osman, los dos tardanza que habia tenido en enviarlos
mil en pago del buen servicio que le y procurar su libertad acusándole de
hacia, y , el resto para el rescate de descuidado y de ingrato amigo. -

Alonso de Robledo de quien don Mar Vióse por el pronto perdido don
tin no se habia olvidado hablar al rey Martin, y como una vez roto el freno
suplicándole mandase hacer algo, par saludable de la conciencia y del honor
ticularmente para proporcionarle su puesto el pie en la fatal pendiente del
libertad. crímen se recorre rápida y fácilmente ,
Recibido este dinero, y por una fa hasta caer en el abismo.
talidad, no hallando ocasion de remi Don Martin para ocultar un delito
tirlo al pronto á Constantinopla, su se resolvió á cometer otro mayor.
maldita aficion al juego le hizo, faltan Olvidado de su noble nacimiento,
do á todas las leyes de honor, el dis de las leyes de la amistad y del ho
poner de ellos. nor, en vez de contestar al bajá y á
Don Martin habia vuelto con bas— Robledo, halló medio de escribir al
tante dinero y algunas ricas alhajas sultan dándole cuenta de algunas co
que habia debido á la generosa mu sas que con su travesura supo inven
nificencia del sultan. tar, con que parecia que sin descubrir
Su casa mas que nunca volvió á ser nada importante cumplia con lo que
el centro de los jugadores mas des el sultan le habia encomendado. Al
acreditados de la córte. mismo tiempo, y no olvidando nun
Alli á las cartas perdió cuanto di ca como buen jugador la cuestion de
nero tenia, cuantas alhajas habia trai dinero, que era para él en el estado de
do de Constantinopla. abyeccion en que se hallaba la princi
El juego lo habia devorado todo, iba pal, se quejaba de que Osman retenia
á poner á las cartas el honor, su vida en su poder dos dineros que el sultan
misma, le daba para que se los enviase. Acusa
340 CAUSAS CELEBRES,
-E=

ba á su víctima del delito que él mis Era hombre de ingenio como he


mo habia cometido. mos podido reconocer en el modo con
Tambien hacia al sultan la im que aconsejó á don Martin que siguie
portantísima revelacion de que Os se sus negociaciones con el sultan para
man era un traidor, un espía que se servirle en Madrid, creyó que uno de
hallaba dentro del mismo divan, que los medios con que podria hacer desde
descubria los secretos de él al rey de su cautiverio llegar á noticia de Feli
España, proponiendo al Gran Señor en pe II, que por la acusacion de don
comprobacion de la verdad de lo que Martin Acuña habia perecido en el palo
le denunciaba, que prendiendo de im el bajá Osman como confidente secreto
proviso al bajá, mandase recoger con del monarca español, era el propalar
todo rigor y examinar todos sus pa públicamente esta noticia.
peles. Con una perseverancia sin igual,
De Robledo no dijo nada, parecién fué publicando de unos en otros el su
dole que importaba poco para ocultar ceso de tal modo, que logró su intento
su delito el que aquel testigo de su de que llegase á oidos del rey Felipe II,
crímen quedase vivo, toda vez que ya por los esclavos que rescatados vol
habia de permanecer en el cautiverio, vian á su patria, ya porque algunos es
estado que se diferencia muy poco de cribiesen á España un suceso que
la muerte. tanto habia afectado y cuya causa des
Ademas tenia pensamiento, si me conocida en un principio, habia cuida
joraba de fortuna, de rescatar á Ro do de aclarar con sus menores detalles
bledo, de quien por ser su amigo y por el desconsolado Robledo.
el favor que entonces le haria, nada Naturalmente suspicaz Felipe II,
debia de temer. comenzó á tener sospechas de don
Amurates III recibió la comunica Martin, aunque solo se fundaban en
cion que le hacia don Martin, é inme rumores que por venir de , tan lejos y
diatamente mandó prender al bajá tener por orígen el dicho de un oscuro
Osman. esclavo, no acababan de persuadir al
Sorprendidos los papeles y exami rey ni á nadie de que en un hombre
nados, quedó en breve convencido de noble, en un esforzado y valiente ca
su delito. pitan cupiese una traicion, una infa
La justicia es pronta y terrible en mia tan grande.
Constantinopla: ademas el crímen era Sin embargo, quedaba en el rey,
de aquellos que en todos los paises se cuyo carácter habitual era la descon
castigan con la pena capital. fianza, la duda de si podria haber sido
Osman fué empalado públicamente engañado.
y la muerte de un hombre constituido Procediendo con la reserva que po
en tan elevada dignidad, causó un nia en todos los negocios, sin declarar
gran sentimiento en todos, empero se con nadie, sin dar á entender á don
muy principalmente en Robledo que Martin, á quien veia algunas veces, el
perdia en él un amigo, un protector, mas mínimo recelo, procuró hacer se
que sentia el atroz remordimiento de cretas averiguaciones para inquirir la
haberle causado la muerte por su verdad.
imprudente confianza en el capitan Dispusiéronse casualmente las co
Acuña. sas de tal modo, que sin costarle á Fe
Robledo habia visto morir en el pa lipe II muchas diligencias, se le vino,
lo en Constantinopla á su bienhechor. como vulgarmente se dice, la infor
Culpábase de ser el autor de aquel macion á las manos.
terrible suplicio, porque por él habia Providencial parece el modo con
sabido Acuña que Osman recibia suel que se descubrió de una manera evi
do y era un espía de Felipe II. dente la infamia y crímen de don
Trató pues de vengar la muerte de Martin.
su querido amo. ¿Qué podia hacer un A los pocos dias logró Robledo es
miserable esclavo á tanta distancia de caparse de su cautiverio á favor de la
España, sin medios de comunicacion confusion que habia producido la con
con el rey y la córte? fiscacion de los bienes de Osman y el
DON MARTIN DE ACUÑA. 34.
=E=- ->

reparto de sus numerosos esclavos en- que podria ser que le viniese a ca
tre otros dueños. pitan otro suceso igual al que él habia
Robledo habia llegado á España, hecho pasar al desgraciado Osman.
desembarcado en Cádiz y desde alli Robledo manifestó entonces á su
dirigídose á Sevilla. amigo que él desde la muerte de su
Estando paseándose por las márge-amo habia trabajado constantemente
nes del Guadalquivir en el barrio de con los pocos y escasos medios que en -
Triana, se encontró con un soldado su triste posicion tenia, en vengar á
muy conocido suyo del tiempo que ha-aquel turco, en quien durante los dias
bia andado en las galeras, y que ha-aciagos de su esclavitud, cuando se
bia estado cautivo tambien en Cons-hallaba abandonado de todos, habia
tantinopla, porque habia sido uno de encontrado, en vez de un amo duro y
los que Uluch—Alí habia cautivado en cruel, un bienhechor, un tierno ami
el buque en que con tanto denuedo se go, y un cariñoso padre.
habia batido en las aguas de Valencia El soldado con quien acababa de
contra aquel pirata el capitan Acuña. encontrarse Robledo estrechando su
Este soldado cautivo fué tratado en mano le dijo, que Dios en aquel mo —
Constantinopla por su amo de muy mento le inspiraba le descubriese lo
distinto modo que lo habian sido don que tenia determinado encubrir y ocul
Martin y Robledo. tar de todo el mundo.
A este y otro hermano suyo que Entonces manifestó á Robledo que
tambien quedaba cautivo en poder del el bajá de quien él y su hermano eran
mismo dueño, les habian dado el bár-esclavos y de quien tan duros trata
baro y cruel trato que acostumbran mientos recibia, le habia llamado dán
los turcos á los cristianos. dole su libertad, prometiéndole ademas
Al verse los dos antiguos amigos, la de su hermano, el que habia que
corrieron el uno al otro con los brazos dado alli en garantía del cumplimien
abiertos, se abrazaron con la mayor to del encargo que le habia hecho.
ternura repetidas veces dándose el Este encargo era el poner en ma
uno al otro mil parabienes al verse li-nos del capitan don Martin de Acuña
bres en su patria, ellos que tantas ve- unas cartas y el recibir su respuesta
ces , aunque con diversa fortuna, se cuidando de dirigírsela y recibiendo á
habian visto esclavos en Constanti- su llegada su hermano la libertad. Es—
nopla. te habia sido, le dijo á Robledo, el ca
Comenzaron porque nada hay mas mino que Dios le habia abierto para
grato á los desgraciados como recor-recobrar su libertad manifestándole
dar los tiempos pasados á hablar de que á no estar por medio el deseo de
las diversas aventuras que habian te-ver libre y en su patria á su herma
nido, refiriéndose cada uno el modo no en lugar de poner aquellas cartas
con que habia conseguido su libertad. en manos de don Martin indudable
Contó Robledo su peregrinacion, mente las pondria en las del mismo
los largos y penosos trabajos de su ca- rey Felipe II.
mino para encubrirse hasta llegará un Dilatóse el corazon de Robledo al
puerto de España. ver la ocasion que providencialmen
Vino á tratar como era muy natu-te se le presentaba de vengar á su
ral por haber sido la causa de su fuga, buenºmo y castigar la negra ingrati
de la cruel muerte que Amurates III tud con que le habia tratado don Mar
habia mandado ejecutar en Osman. El tin. Empleó todos los recursos de su
soldado amigo de Robledo se habia ha- buen genio en persuadir á su amigo
llado tambien presente á aquel terri- de que si queria gozar de su libertad
ble espectáculo. y ver libre á su hermano de la escla
Con este motivo recayó la conver-vitud en que se hallaba debia entre
sacion en los detalles de este hecho, gar aquellas cartas al rey, porque en
y Robledo, se esplayó sobre la ingra-haber hecho don Martin quitar la vida
titud y mala correspondencia que con á Osman por ser servidor de Felipe II
él habia observado don Martin. y en recibir ahora cartas de los mi
El cautivo dijo entonces á Robledo"nistros del sultan y esperar estos que
3.42 CAUSAS CELEBRES
==

les responda y ser las cosas que alli le negocio á que venian con el secreto
escriben tan importantes, que por su que requeria el caso.
porte le prometian á él y á su her El Presidente conoció toda la es
mano la libertad, se convencia que de tension de la importancia del asunto y
bia haber encerrado algungran misterio como era ya la hora del anochecer se
descubriéndoselo al rey, no solo le fué con ellos á Palacio y los introdu
aria mercedes, sino que procuraria la jo secretamente á la presencia del
libertad de su hermano. Hízole ver la TeV.
oca seguridad que debia tener en que contaron á Felipe II todas las par
os turcos le cumpliesen lo que le ha ticularidades de que llevamos hecha
bian prometido, acerca de la liber mencion. Holgóse el rey de oirlas, les
tad de su hermano y que aun cuando él dirigió con tono afable para animarlos
quedase con ella, seria una libertad varias preguntas á que contestaron con
y una vida llena de zozobras y temo soltura y con el acento irresistible de
res, porque en el mundo con el tiem la verdad.
po se descubre todo, y cuando se lle Tomó el rey las cartas y las guardó.
gase á entender que él habia sido el Como el asunto era tan grave, co
portador de aquellas cartas le habia de mo exigia el mas profundo secreto, Fe
costar la vida en un suplicio y la honra. lipe II con aquella prudencia que mos
Ponderóle lo poco que habia que fiar en traba en todos sus actos, mandó al Pre
don Martin que tan alevemente y con sidente que á aquellos dos hombres los
tanta crueldad habia hecho matar al ba tuviese á buen recaudo encubiertos sin
já y que con la misma facilidad le haria que nadie supiese ni aun sospecha
matar á él si llegaba á tener alguna sos se su existencia hasta qne él determi
pecha de que se descubriesen sus tra nase lo que se habia de hacer con
tos. Hízole ver que debia tener ya esta ellos. -

sospecha porque era una cosa muy pú El presidente del consejo se los lle
blica que el aviso que él dió al sultan vó otra vez á su casa donde diciéndo
habia sido la causa del empalamiento les lo mucho que importaba al servi
de Osman, y que el mejor camino que cio del rey que aquel negocio se lle
podria tomar para ver en libertad á vase con gran secreto quedaban alli
su hermano y conseguir alguna recom detenidos.
pensa del rey era el hacerle ver el Grande fué el susto de los dos sol
engaño con que don Martin le vendia endados, empero procuró tranquilizarlos
las cosas de su servicio. el Presidente diciéndoles que nada te
Instóle á esto repetidas veces Ro nian que temer y si esperar mucho
bledo ofreciéndose á acompañarle y de la bondad de 8. M. á quien acaba
servirle de testigo de vista para com ban de prestar un señaladísimo ser
probar la verdad de cuanto el rey vicio.
quisiera saber y dijesen aquellas car Algo se sosegaron con esto y mas
taS. que nada con el escelente trato que
Poderosas y convincentes fueron recibieron en los ocho dias que los tu
las razones de Robledo para persuadir bo encerrados en una habitacion de
á su amigo. su casa el Presidente, en donde tan
Pusiéronse ambos de acuerdo y al encubiertos y ocultos estuvieron que
dia siguiente determinaron tomar el hasta las personas de la misma casa
camino de Madrid contentos ambos, no supieron que aquellos hombres es
Robledo con la esperanza de vengarse taban escondidos en ella.
de don Martin y el otro con la de con El mismo don Rodrigo Vazquez, el
seguir la libertad de su hermano y primer dignatario de la monarquía Es
asegurarse su subsistencia, gracias al pañola, la mas poderosa entonces del
precioso tesoro de que eran poseedores. mundo, les llevaba la comida, que á
Llegaron á Madrid y lo primero que pretesto de ser para él, hacia colocar
hicieron fué presentarse á don Rodri primero en su despacho y él les entre
go Vazquez presidente del Consejo de gaba despues.
Castilla. En el entretanto habia dispuesto el
Diéronle cuenta de la gravedad del rey con el mayor cuidado y gran suti
DON MARTIN DE ACUÑA. 343
-
- -

leza se abriesen las cartas de modo creto ó cuando menos dar algunas sos
que pareciese no haberse tocado á echas si le veian retraido escri
ellas. Consiguióse esto, y el rey don biendo.
Felipe º con sus propios ojos una Asi es que citó al soldado para que
carta del sultan Amurates en que fuese á recibir la respuesta al dia si
agradecia á don Martin los buenos avi guiente.
sos que le daba muy importantes para Pasó este con toda puntualidad á
su servicio, y en particular le ponde recogerla, habiéndosela entregado sin
raba lo mucho que habia estimado el el menor recelo don Martin, viendo
haberle descubierto de un modo pal cuán seguro conducto habia sido aquel
pable la traicion que su bajá Osman hombre para traerle la del sultan, á
le hacia descubriendo al rey don Feli que era contestacion la suya.
pe los acuerdos del divan, y que en cas Apenas habia el amigo de Robledo
tigo de aquel gran delito, le habia lue recogido la contestacion, fué á reunir
go mandado matar, y que los dineros se con aquel en su escondite de la
ue Osman habia retenido en su po casa del Presidente á quien la en
er, y que él habia dado para que se tregó.
los enviase, se cobrarian de sus bienes on Rodrigo Vazquez marchó en el
y se los mandaria doblados, prome acto á verse con el rey que se hallaba
tiendole otras mayores recompensas. con impaciencia por ver el modo y for
Tal era el contenido de la carta del ma con que se espresaria don Martin.
sultan y aunque ya el rey Felipe II te Abrió el rey la carta, y leyó en ella
nia, como hemos visto, sospechas de el grande agradecimiento que mani
don Martin, con su lectura quedaron festaba don Martin á las mercedes re
convertidas estas en evidencia. cibidas por el sultan, y lo mucho que
Todavía quiso Felipe II proceder ofrecia hacer para merecerlas en deser—
con mas detencion en este gravísimo vicio del rey, suplicándole, porque sus
asunto. Todavía quiso adquirir una necesidades eran muchas, le mandase
prueba mas terminante y convincente acudir con brevedad á lo menos con
del infame delito del capitan Acuña. los dineros que le habia tomado el ba
Mandó volver á cerrar las cartas ni
já Osman. Ademas de esto, para obli
mas ni menos que lo estaban antes. garle con alguna apariencia de servi
Hizo que al cabo de los ocho dias cios, le daba cuenta de algunas cosas
viniese á presentarse en su real cá que realmente eran mentiras é inven
mara el presidente Vazquez con sus ciones suyas, pero con gran colorido
dos reclusos. de verdad: en que mas que perjudicar
El rey volvió á hablará Robledo y al rey, trataba de entretener con en
á su compañero, previniéndoles al dar gaños al sultan para sacarle dinero.
les las cartas que fuesen con todo el Habia ya una prueba plena, plení
disimulo posible á casa de don Martin sima del crímen de don Martin.
de Acuña y se las entregasen, y des Este, mas que de traicion al rey re
pues que recogiesen la respuesta, avisa velando secretos de Estado que no
sen al Presidente para que con él se la estaba á su alcance por su posicion
trajesen. descubrir, consistia en la muerte que
Asi lo verificaron: aunque Robledo, habia hecho dar á Osman por apode
de acuerdo con el Presidente para que rarse del dinero que el rey le habia
don Martin no sospechase algo, al ver dado para él : en haber privado por
que se hallaba en Madrid no acompañó su codicia al rey de un fiel servi
al soldado. dor, de un importante instrumento de
Llevó éste las cartas á don Martin, su política en los consejos del sultan,
el que para abrirlas y responder á y en haber defraudado al rey en los
ellas recelándose de todo el mundo se tres mil ducados que le habia sacado
salió de su casa y se fué á una quinta diciendo haberlos mandado á Constan
de recreo que tenia un amigo º en tinopla.
el campo, porque en su casa el con Mandó el rey al presidente Vazquez
tínuo concurso de personas que acu ue aquella misma noche hiciese pren-,
dian al juego, podia sorprender su se dº á don Martin sorprendiéndole los
344 CAUSAS CELEBRES
---

papeles y cartas que se hallasen en su ¿ mas diligencias que habia hecho su


poder. amilia, habia podido adquirir el mas
El presidente don Rodrigo Vazquez pequeño indicio.
dió comision á un alcalde de casa y Hallábase don Martin de Acuña en
córte, que con su ronda pasó á cercar el castillo de Torrejon de Velasco en
la casa en que vivia don Martin Acu un oscuro calabozo sin comunicacion
ña en la calle de Cantarranas. con nadie, encadenado desde el primer
Eran las diez de la noche. dia que llegó.
Llamó el alcalde, y tardaron en El rey Felipe II pasó las dos cartas,
abrirle; no recelaba don Martin que la del sultan Amurates III y la contes
viniese la justicia á prenderle por tacion de don Martin á éste, á su Con
conspiracion. Creia sí, que venian á sejo para que se averiguase este deli
perseguir los jugadores que en bastan to y se conociese de él por tela de jui
te número se hallaban reunidos á cio la culpa que de él resultase, y se
aquella hora en su casa. castigase sin remision alguna.
Hizo un escrupuloso registro bus Un alcalde de casa y córte fué á
cando papeles y cartas, pero no encon Torrejon de Velasco para hacer las ave
tró mas que las de la baraja riguaciones por sí mismo, y tomar las
El alcalde con gran secreto y sin confesiones á don Martin, escribiéndo
haber manifestado á nadie, ni aun á él las por su mano sin asistencia de es
mismo la causa de su prision, lo metió cribano. Todo se condujo con la ma
en un carruage, y en aquella misma yor reserva, y llevado á cabo el nego
noche lo llevaron á la torre del pue cio, dictó el Consejo sentencia de muer
blo de Torrejon de Velasco, á cuatro te sin haberse nombrado al reo procu
leguas de Madrid. rador, ni oídosele defensa alguna.
Aquella misma noche, despues de Se llevó hasta tal punto la reserva
verificada la prision, el presidente del de este negocio que se previno que al
Consejo don Rodrigo Vazquez, dió suel noticiar instantes antes de la ejecu
to á los dos huéspedes que por tantos cion, al reo la sentencia, no hubiese
dias y con tanto secreto habia tenido nadie que pudiese oirla.
y regalado en su casa. , , Para cuidar de la salvacion de su
Al soldado Alfonso Robledo, en pre alma, de que hemos visto era tan ce
mio de lo que habia hecho con su loso Felipe II con los que su política
compañero para que denunciase los tra condenaba á muerte secreta, y como á
tos de don Martin con el sultan, le dió don Martin no se le habia de notifi
el rey la gineta de sargento en una de car su muerte con la anticipacion que
las compañías de Italia: y al otro sol previenen las leyes del reino, se tra
dado que habia traido las cartas mandó tó de insinuarle que irremisiblemen
el rey se le diese el rescate para su te tenia que morir, dejándole igno
hermano y ademas otra gineta en las rar el dia.
compañías de Flandes. A ambos se les Asi estuvo cerca de un mes en la
previno que olvidasen cuanto habian mas cruel agonía en ese terrible pa
en aquel asunto visto y oido porque decimiento moral de la capilla, mas pe
la menor palabra, la mas ligera impru noso al reo aun que el mismo suplicio.
dencia que cometiesen les costaria la Asi veremos temblar medroso an
cabeza. te la muerte á don Martin Acuña, ese
Tuvieron buen cuidado de callar, capitan denodado y valiente que en
porque sabian por esperiencia que las los campos de Flandes y de Portugal
amenazas de Felipe II no eran amena habia llamado por su bizarría la aten
ZaS en Vall 0. cion del gran duque de Alba: ese in
Don Martin habiá sido sacado de su trépido aventurero, que atravesando
casa de noche en secreto. Nadie ni toda la Persia, desafiando cien veces
su muger, ni su hermano, ni sus ami la muerte, vuelve á Constantinopla
gos sabian donde existia. despues de haber arrancado y sorpren
Habia como desaparecido repenti dido los secretos de aquella nacion: asi
namente de sobre la tierra. á este hombre estraordinario lo vere
Habian pasado seis meses, y nadie, mos temblar como un miserable, como
DON MARTIN DE ACUÑA. 345
-

una débil muger á la idea de una gir, y desconsolar, de manera que es


muerte en dia incierto pero por mano to solo le habia de acabar, especial
del verdugo. mente si se le decia desde luego y
Felipe II hizo que cerca de un mes habia de estar aguardando la muerte
antes de la ejecucion secreta de don algunos dias, y que por esta razon no
Martin Acuña fuese á vivir á la misma convenia que le dejasen un punto des
torre de Torrejon de Velasco el padre pues de haberle dado tan triste nue
Cristóbal de Collantes, religioso de la va, ó que si no podia hacer esto que
Compañía de Jesus; ni mas ni ménos me volviese sin hablarle, guardándo
que como habia hecho marchar quince lo para el mismo dia en que hubiese
años antes en 1570 al padre fray Her de morir. Acordándoseme del descon
mando del Castillo, aunque no con tan suelo y desfallecimiento con que habia
ta anticipacion, para fortalecer en el quedado quince dias antes que habia
trance de su ejecucion secreta al ilus ido á confesarle con no haberle qui
tre baron de Montigny, señor Montmo tado del todo la esperanza del vi
rency. - vir, se me hizo muy verosímil lo que
El Padre Collantes, con ese admi el alguacil temia, y me determiné de
rable tacto propio de los jesuitas, co dar parte de esto al ministro de S. M.
menzó á estrechar con él su trato y que me habia enviado, y con este des
á darle á entender lo inevitable de su paché un peon para Madrid y volvió
suerte y á consolarle en su larga ago con la respuesta el dia siguiente jue
nía. ves en la noche diciéndome que no
Para describir las terribles impre embargante lo propuesto, hiciese des
siones de esta ejecucion secreta y las de luego mi oficio, pues no se preten
diversas sensaciones que en los muchos dia en ello mas que su bien, y que su
dias que precedieron á ella esperimentó cediese lo que sucediese que no ha
el desgraciado don Martin de Acuña, bia lugar de mas dilaciones, y con es
transcribiremos, porque no podriamos to luego el viernes por la mañana le
hacerlo ni mejor, ni tan detalladamen envié á decir mi llegada, y como le
te, ni mas á gusto de nuestros lectores, queria entrar á ver.
la carta original que escribió el padre Al punto que este recado recibió
Collantes al provincial de la compañía luego se dió por muerto, diciendo: es
de Jesus, el padre Antonio Deza y que to es hecho, acabados son cuentos,
hemos copiado de los manuscritos (1) muerto soy. Entré adonde estaba y ha
ue existen en la Biblioteca Nacional lléle acostado en la cama con todas
e Madrid. sus prisiones como lo estuvo desde la
hora que alli llegó, que fueron mas de
Por entender que V. R. ha oido siete meses, hasta la en que espiró. Sin
buenas nuevas de aquel caballero á levantarse de ella abrazéle, y saludé
quien yo fuí á ayudará bien morir, y le con la mayor demostracion de amor
que desea saber en particular todo el y compasion que pude.
suceso de este negocio, lo haré por Recibióme con gran turbacion y so
ésta con el auxilio del Señor. bresalvo, por mas que todos aquellos
-

Partí de aquíá 30 de enero para don dias atrás estaba temiendo, siempre
de estaba á procurar, con la ayuda de aguardando aquella nueva, y con aque
Dios, irle disponiendo para este tran lla turbacion y alboroto me dijo: lue
ce de la muerte. Pensando volverme go padre es esta la postrera visita, y
al dia siguiente para tornar por últi el postrero de mis dias. No le quise
ma vez de ahi á pocos dias, y en lle responder luego á esto, mas procuré
gando hablé á uno de los alguaciles aquietarlo un poco, diciéndole que fia
que le guardaban, el cual me significó se de Dios que lo habia de ayudar siem
estar tan temeroso de la muerte y con pre y que le habia de dar todo lo que
gojado, que tenia por cosa cierta, que mas le conviniese, que él no desease
en certificándose de ella, y cuán en otra cosa sino ésto. Yendo él hacien
breve habia de ser, se habia de afli do instancia en preguntar si habia de
morir luego, ó cuando, ó donde, me
(4) (S. 247.)
-

forzó á decirle º
la verdad del ne
346 CAUSAS CELEBRES.
º------------º",

gocio diciéndole: señor, á mí no me di como era don de Dios y gracia suya,


¿ que viniese á ayudar á morirá aquel temor y principio de entrar en
uestra merced, sino á disponerle con gracia con Su Divina Magestad; y que
la gracia y favor de nuestro Señor para tenia tiempo y remedios muy eficaces
cualquiera cosa que su Divina Mages para escapar de tanto mal como temia,
tad quisiere ordenar de Vuestra mer y con tanta razon pues conocia haber
ced. A esto me respondió: padre eso ofendido á la Magestad de Dios. "Decla
es decirme claramente que tengo de réle lo que era contriccion y lo que su
morir luego. plia la virtud y eficacia de los Sacra
Señor mio, dije yo, esso es lo que mentos de Christiano, cuando la con
me dijeron, y conforme á esso no per tricion no llegaba á ser entera y per
damos tiempo. Assí como oyó estas pa fecta, y como pidiéndola á Dios se la
labras, comenzó á temblar con todo el daria, y declarándole cual habia de ser
cuerpo rezíssimo, como si le hubiera esta peticion para alcanzarla, y con es
venido una muy recia terciana y du to y con ayudarle á hacer algunos actos
róle "¿ de un quarto de hora sin de contriccion se sosegó algo. Represen
oder hablar, ni , responder palabra. tósele luego la manera de muerte que
asado este accidente, me preguntó aguardaba, y , empezó á acongojarse
si habia sabido si tenia bula de Cruza randemente diciendo: º el Inan OS
da, y si le habia negociado licencia pa ¿ un verdugo tengo yo de acabar, oh
ra comulgar, asegurándole de entram desdichadísima muerte, que el primero
bas cosas d que nos avisarian con de mi nombre y de mi linage que en tal
tiempo del dia que habia de ser la co ignominia se ha visto tengo de ser yo
munion, diciéndole tras esto que se que haya de ser el que tal afrenta ten
ria bien que aunque la vez pasada que go de poner en un linage donde tanta
yo, alli habia estado, que habria como gente honrada ha habido y hay; y otras
uince ó veinte dias, se habia confesa muchas cosas que en substancia eran
o generalmente, tornase ahora de las que tengo dichas, repitiendo á cada
nuevo á recorrer toda la confesion he momento con grandes suspiros y do
cha, y vida pasada y se fuese recon lor, esta palabra: verdugo, verdugol
ciliando como se le fuesen acordando pidiendo á los que con él estábamos
las cosas, y esto como quien remataba con grandes ruegos, y obsecraciones
quentas con Dios, porque donde enton por Jesucristo y su pasion, que diése
ces cayese el madero alli habia de mos órden, como ya que no se podia
quedar para siempre. escusar el morir á manos del verdugo,
Dijo que assi lo queria hacer y que que á lo menos no le viese él por sus
daba infinitas gracias á Dios por el ojos. Acordándosele tambien que su
tiempo y aparejo que para ello le da muerte habia de ser con soga, no le
ba, en ocasion de tanta necesidad. Assi causaba menor horror y espanto que
como comenzó á pensar en esto, co el verdugo, y decia: que con una soga
menzó á temer grandísimamente el tengo de ver atormentar mis carnes
infierno con grande afliccion y descon hasta que me quiten la vida, oh soga!
suelo, diciendo á cada paso: ¡oh in ¡oh soga, no la vea yo por la sangre de
fierno! ¡oh infierno! ¡oh tormentos eter Dios hágaseme esta merced, no vea
nos! ¡oh pena para siempre, Señor, yo tal cosa sobre mi cuerpo; y daba y
libradme, Señor, no vea yo el infierno, tomaba en esto sin poderle divertir
no vaya yo allá, non intres in judicio otra cosa, diciendo palabras de estraño
cum servo tuo quia mon Justificabi dolor y afliccion.
tur, etc., ¡oh pecados que en tal pe Finalmente se le representó la sen
ligro me teneis puesto ú otras muchas tencia que habia de oir en que le ha
cosas assi de versos de psalmos, como bian de condenar á muerte tan peno
alabras suyas propias con que mani sa, y horrible para él: y no sabré yo
estaba un grandísimo temor de conde encarecer el sentimiento y la flaqueza
narse, con grandes suspiros y demos de corazon que para recibir tal golpe
tracion de estar como asombrado de mostraba, y assi aun con mayores en
verse en tal peligro. carecimientos, y gemidos pedia á to
Aqui le procuré ayudar diziendo, dos no diéssemos lugar á que tal Sep
-”.

DON MARTIN DE ACUÑA. 347


User = se

tencia oyese, sentencia, decia él, tan voluntas, sed tua # y haciéndole
afrentosa, de tanta ignominia, y des repetir estas palabras, siempre que
honra, á muerte de soga á manos de suspiraba y gemia sensiblemente se
un verdugo, y que me han de decir via irle Dios con ellas ayudando á tra
tales cosas, y con testigos y nom gar el calix de la muerte.
bres tan afrentosos, que tal tengo de En estos dares y tomares gastamos
oir por mis oidos, no por amor de aquellos ¿? dias que fueron vier
Dios, no por su Pasion, no por la Sa nes y sábado y veíase claramente irle
cratísima Vírgen María, bastará que nuestro Señor ayudando y fortalecien
el secretario que viniere me diga que do. Aunque nunca acababa de tornar
el rey me manda matar, sin que aña á estos mismos temores de quando en
da mas, sin decirme por qué, ni có quando. Aunque pasado aquel primer
mo, porque con el matarme quedaré asombro y espanto que de estas cosas
tan castigado y muerto, y el rey tan recibió, lo mas ordinario gastaba el
satisfecho, como si me hubiesen noti tiempo en reconciliarse á cada , pala
ficado la sentencia en pregones seño bra, y en tornar á sus temores del In
res, ninguna cosa podrá haber que assi fierno y en hacer actos de contriccion
ponga en peligro la salvacion de mi y esperanza.
alma, como el ver, y oir tales cosas, Leíale la pasion de Cristo nuestro
repitiendo: ¡oh soga! ¡oh verdugo! ¡oh Señor por San Juan y algunos salmos
sentencia y otras palabras seme apropiados para aquel tiempo y sazon
jantes. - en que estaba muy mucho con la gra
Ofrecíamosle todos los que le ha cia de nuestro Señor, diciendo muchos
blábamos que procuraríamos cuanto versos de David que sabia, y algunas
nos fuese posible que ni viese verdu palabras de santos que habia oido, ó
go, ni soga, ni oyese sentencia, y de leido, porque era muy buen latino, to
aliviarle en todo lo demas, su trabajo do pidiendo perdon á Dios de sus pe
y fatiga en quanto se nos diese lugar. cados, y señaladamente decia muchas
Yo le procuré consolar dándole á veces. Domine pone me justa te: in cu
entender que tenia poco de que hacer yus manus pugnet contra me. Non intres
caso, ni temer semejantes cosas, quien in juditio cum servo tuo. Deus cui pro
tenia ya tragada la mesma muerte, pium estmiserere semper, et purcere y
pues el ser assi, ó assi, es de mucha otras muchas oraciones en prosa y en
menor consideracion que el mismo verso á nuestra Señora muy devotas.
morir, y diciéndole que una de las Y diciendo unos versos en alabanza de
muertes con que mas se debia conso nuestra Señora que me encantaron le
lar por ser mejor para el cuerpo, honra pregunté de que autor eran: y con un
y alma, era la que él esperaba, pues grandísimo suspiro me respondió: este
habia ser tan breve, y en secreto, y desventurado que aqui está, los hizo
para negociar su salvacion tan apropó en Alcalá, cuando no era tan gran pe
sito por no haber en ella las penalida cador y malvado como despues acá
des, dolores y flaquezas corporales y ha sido.
falta de juicio que en las enfermedades Decia todas estas cosas teniendo
comunmente hay y que tanto suelen siempre en la mano un Crucifijo pe
estorbar el trato con Dios, que en tal queño sin dejarle un punto de ella ni
punto es tan necesario. apartar los ojos de él, besándole y ado
Fuí en particular representándole rándole casi á cada palabra que habla
la pasion de Christo Nuestro Señor, ba hasta que espiró.
tan llena de injurias y de oprobios, y Rezábale yo cada noche una letanía
nuevas invenciones de tormentos y á la cual me respondia él mismo y aca
penas, y como alli habia habido ver bada tomaba la mano á hablar con el
dugo, soga, y sentencia, y pregones crucifijo y hacia unos coloquios muy
delante de todo el mundo. devotos y concertados pidiendo siem
Oyendo estas cosas decia muchas pre perdon de sus pecados, encomen
veces transeat á me caliac iste, díjele dándose á los santos y señaladamente
que pasase adelante y dijese sed non á nuestra Señora, de quien decia haber
quod ego volo sed quod tu vis non mea sido siempre muy devoto: y cierto lo
348 CAUSAS CELEBRES.

mostró muy de veras en la confianza conciliar y le dije alli missa, y para el


con que todo este tiempo á ella acu tiempo de la comanion le pusieron de
dia con h ymnos y oraciones como he rodillas sobre la cama con una ropa de
dicho. levantarse, y llevándole sobre la pate
Dijéronme los alguaciles que lo na el Santísimo Sacramento, se ten
guardaban que todo el tiempo que es dió á la larga de manera que puso la
tuvo preso ayunó todos los miércoles, boca sobre la misma tierra, y de esta
y hacia cada noche al tiempo que manera con grandes sollozos y lágri
ellos y las guardas se acostaban, unos mas dijo la confesion general y acaba
coloquios con nuestro Señor y con su da de decir se tornó á poner de rodi
Santísima Madre teniendo el crucifijo llas, y hizo una protestacion de la Fée
en la mano con tanta devocion y con en que habia vivido siempre y queria
tales palabras que los dejaba admira - morir, y un coloquio muy tierno y de
dos. No se descuidaba á preguntar voto al Santísimo Sacramento dio
cuando habia de comulgar, assi por el racias por todos los beneficios recibi
deseo y devocion que el Señor le dió ¿ confesándose por el mayor peca
de la Comunion que fué muy grande dor de los nacidos, y mas indigno de
en este trabajo, como por entender todo bien, pidiendo perdon de sus pe
que aquella habia de ser víspera y cados por la virtud y merecimientos
cierta señal del dia de su muerte, la de todos los Misterios que Christo
cual por momentos estaba recelando nuestro Señor obró para nuestra re
que se llegaba. dempcion, su muerte con la
Aviséle el sábado por la tarde como del mismo Señor y ofreciéndosela para
aguardaba licencia de Madrid para de remedio de su alma, todo esto con
cirle allí missa, aunque no sabia para grandísimo sentimiento y tantas lágri
qué dia me la enviarian, y el domingo mas, que á todos los presentes nos las
por la mañana al amanecer oyó llamar hizo derramar de devocion y compa
á la fortaleza, y dándole el corazon lo sion, y con esto recibió el Sao
que era, dijo: éste que llama trae li Sacramento, y se acabó la missa y él á
cencia para que me comulguen luego: sus solas se quedó dando gracias á Dios
y assi fué, porque luego subió uno de por aquel beneficio.
los alguaciles, y le dijo, como pidién Acudí luego á estar con él por sa
dole albricias: señor, ya tiene vuestra ber que habia de ser su muerte muy
merced licencia para oyr aqui o y mis en breve. No cesaba un punto de ha
sa y comulgar; y aunque esto era una blar con nuestra Señora, con el Angel
cosa dél muy deseada y pedida, como de su Guarda, decir versos de David,
sintió llegársele la muerte, causóle llamar á todos los santos mirando
tristeza, y mostrándola en gran mane siempre al crucifijo que en la mano
ra pidió al alguacil muy encarecida tenia, y claramente se veia, que cuan
mente dilatase la comunion para otro to mas se llegaba á la muerte, le iba
dia, diciendo que aun no estaba bien nuestro Señor mas poderosamente ayu
aparejado para comulgar, rehusando dando y conformando con su Divina
siempre la carrera que le habia de lle voluntad y esforzando para el padecer.
var á la muerte, que por entonces tan Díjome esta tarde: no sé, Padre, si
amarga y trabajosa se le representaba. ha echado Vuestra Reverencia de ver
Mas respondióle el alguacil, cómo no que no le he hablado palabra en una
habia lugar lo que pedia, ni acaso de cosa que por sentirla tanto no me he
replicar él á quien lo ordenaba. atrevido á hablar en ella, mas ya no
Preguntó: si le matarían luego en puede sufrirlo mas mi corazon y assi
habiendo comulgado, y el alguacil le lo quiero decir, y es, que llevo atrave
aseguró que por aquel dia y el siguien sado en el alma este hijo que dejo;
te no morirío, él se sosegó algun tanto, pídole á Vuestra Reverencia por Je
y levantándome yo que siempre dormia sucristo, que se encargue de procurar
en su mismo aposento junto á él, le que su madre le crie como christiano,
advertí cómo se habia de aparejar para y con temor de Dios, como se pueda
aquella última comunion, y en tanto salvar sin venir á un tan desdichado
recé mis horas y luego le volví á re punto como este en que se ve este
-
DON MARTIN DE ACUÑA. 349
- === ----- ==

desventurado de su padre. Dijo esto to que habia de ser asi, le quise ir


con tanto sentimiento y ternura, que avisando de la verdad para que mas
á mí me enterneció grandemente y se fuese ayudando con la gracia del
le ofrecí en cuanto á mí fuese posible Señor, y le dije: bien podrá ser que
lo que con tantas veras, y con tan san sea esta noche sin dilatarse mas.
to celo, en tal ocasion me encargaba El con gran turbacion, dijo: ¿pues
(deja este niño solo que es de edad de cómo me ha asegurado el alguacil que
seis ó siete años). Tornaba siempre de hoy, ni mañana seria? respondile: eso,
cuando en cuando á afligirse acordán señor, se hizo para que Vuestra Mer
dose del verdugo, soga y sentencia ced, sin turbacion se aparejase para
como he dicho, y viéndole todavía tan comulgar y asi no hay que fiar de eso;
temeroso, para ayudarle y animarle le porque el alguacil no sabia, ni sabe
leí las lecciones de la vida de San Ig cosa por donde pueda asegurarlo.
nacio, mártir, que rezamos á los may Tornóme á preguntar: ¿pues cómo
tines el dia de su fiesta, en que aquel no han de pasar veinte y cuatro horas
mártir glorioso llama y desafía á todos primero que justicien á uno despues
los trabajos y tormentos del mundo y de la comunion? respondile: basta que
aun á los del mismo demonio, á que no sea en el mismo dia, y asi á cual
vengan sobre él á trueque de que él uiera hora que sea despues de me
goce de Jesucristo, diciéndole mira ia noche se cumple con lo que manda
se con atencion lo que Dios podia la ley.
fortalecer un corazon flaco como lo Con esto se vió ya en el artículo
es el de cualquier hombre, y que de su muerte, y como en la mayor ne
al mismo Dios teníamos entonces tan cesidad se le entró Dios en el corazon,
piadoso d deseoso de nuestro bien, y se le trocó maravillosamente, porque
que le pidiese algo de aquella fortaleza, levantando el Crucifijo con la mano en
por intercesion del mismo mártir glo alto, comenzó á hablar con nuestro
rioso, y sin duda le fué esto concedido Señor, confesándose primeramente por
como luego diré. grandísimo pecador, y por el mayor
Dijome una vez, y con mucho des que habia no solo en el mundo, mas
consuelo, ¿cómo es posible que yo pa aun en el infierno; por el mas escanda
ue mis pecados con esta muerte, pues loso de todos, mas ingrato á los bene
a tengo de pasar no buscándola yo, ficios y misericordias de nuestro Señor,
sino á mas no poder? Consoléle decla y por el que mas que todos juntos ha
rándole, ¿cómo todavía le quedaba al bia sido c usa de que Jesucristo nues
guna libertad para poder merecer, tro Señor tanto º yendo en
pues le quedaba en su mano el llevarla particular diciendo, cómo siempre y en
con paciencia ó con impaciencia, y que todas las edades le habia ofendido, dis
asi como podia desmerecer si la lle curriendo por todos los sentidos del
vaba impacientemente, asi podia me cuerpo y contando las ofensas que con
recer aceptándola pacientemente, y cada uno habia cometido contra Dios,
que se acordase del buen ladron, que haciendo muchos actos fervorosísimos
no buscó su muerte, mas ya puesto en de contriccion diciendo que quisiera
ella, ayudado de Jesucristo mereció haber padecido mil muertes, y perdido
en ella confesando que la tenia bien mil vidas antes que haber ofendido á
merecida, que fué aceptarla con pa un Dios tan bueno y que tanta merced
ciencia y pidiendo á Cristo perdon de le habia hecho, y que ya no hacia nada
sus pecados, y la vida eterna; y esto en ofrecer una que tan poco valía pues
le quitó toda la congoja que cerca de tan presto se la habian de quitar, mas
esto tenia. -
que si tuviera las de todos los hom
Llegóse la noche de este dia, que bres, todas las quisiera dar por Dios y
comulgó, que como he dicho era do— por ganar la eterna.
mingo, y yéndole siempre su corazon Empezó á discurrir por todas las
como anunciando todo lo que en su ne criaturas, el sol, luna y estrellas, cie
gocio se iba haciendo, me preguntó los y elementos cada uno por sí, con
si me parecia que seria su muerte todas las cosas que en ellos habia, y
aquella noche, y sabiendo yo de cier por todos los animales y fieras de los
350 CAUSAS CELEBRES. .
-

campos, y hablando con todas estas deramente mutatus fuit in virum alte
criaturas, se admiraba cómo no se ven rum; y ví á vista de ojos que es fácil
gaban de él por las ofensas que tenia en los designios del Señor súbitamente
hechas contra su Criador, pidiéndoles enriquecer al pobre.
que atormentasen y afligiesen su cuer Acabado este coloquio envió á lla
po; esto deshaciéndose en lágrimas y á mar al alguacil para saber si habian
gritos, comenzó á hablar con todos los llegado los que habian de ser ministros
santos que habian padecido por Jesu de su muerte, y antes de entrar el al
cristo, y á decir que ojalá pudiera él guacil le salí á hablar yo. Supe de él
entonces padecer todo lo que ellos jun cómo eran venidos y que al amanecer
tos habian padecido, discurriendo en habian de concluir su negocio.
particular por todos los que se le re Viéndole tan bien dispuesto al pa
resentaron á la memoria, y por todos ciente, no quise perdiese la ocasion de
os martirios que habian sufrido, por mas se ayudar y merecer, y asi me tor
manera, que ni dejó la espada de San né á entrar donde él estaba, abra
Pablo, la cruz de San Pedro, el aspa de zándome con él, juntando mi rostro
San Andrés, el cuchillo de San Barto con el suyo, sintiendo verdaderamen
lomé, las parrillas de San Lorenzo, ni te sus trabajos y ¿ y como tal
los peines de hierro de San Vicente, nueva le llevaba le dije estas palabras:
ni los leones de San Ignacio, que todo señor mio y hermano de mi alma,
no lo desease para sí, y sobre todo aña Vuestra merced se alegre y consuele,
dió, que todos los demonios del infier y bendiga á Dios: sepa que no le queda
no viniesen y se apoderasen de su mas noche que esta; para esta son las
cuerpo alli y se le atormentasen y des- sogas, yerdugos y sentencias que ya
pedazasen, castigándole aqui por tan-Dios le ha dado á desear; acabándose
tos pecados, porque despues en la esta noche, se acabarán todos estos
otra vida no le tocasen al alma, que males y penas, despues no le queda
era de Dios, y criada por Dios y redi noche, sino dia, y dia eterno de ale
mida por Dios, y que ya no temia ver gría, sin temores, ni sobresaltos, ni lá
dugo, ni soga, ni sentencia; que vinie grimas, ni temor de infierno. Alégrese
sen con verdugos y con sogas, y que y diga Vuestra merced. conmigo Le
¿ á Dios viniese órden que lo tatus sum in his quae dicta sunt mihi
levasen á sentenciar á Madrid, arras- et.=Quan dilecta tabernacula tua do
trado de dos caballos y con pregones mine et. = Unan petis á Domino hanc
públicos los mas injuriosos y afrento requiram et. = recibió este recado y
sos que jamás se dieron contra nadie. dijo estas palabras, aunque con pro
Duró este discurso como hora y me fundos suspiros mas sin temblor algu
dia, á gritos, los ojos hechos carne de no, diciendo aquellas palabras con voz
llorar, y las palabras que cierto enter muy entera añadió: Cupio disolvi et
necieran los corazones mas duros que esse cum Christo.
las piedras, porque parecia que abra Llamó luego al punto al alguacil y
saba el corazon á quien las oía, y á mí
preguntóle que quién era el secretario
cierto me tuvo tan confuso y avergon
que habia venido, es el secretario fu
zado , que no osé hablarle palabra,lano? respondió el alguacil que sí, en
viendo con cuán diferente verdad y tonces dijo: yo me huelgo mucho, es
espíritu de corazon las decia, él, de lo muy honrado, y mi amigo, dígale Vues
que yo las pudiera decir. Quisiera que tra merced que me haga el favor de
todo el mundo le estuviera oyendo, verme luego , porque viene á hacerme
para que de todos fuera conocida y ala muy buena obra y quiero agradecérse
bada la mano del Señor que tan pode la. Respondió el alguacil que hasta la
rosa se mostraba en haber asi trocado mañana que fuese hora, no podia subir
aquel corazon. porque estaba reposando, y viendo que
Creo cierto que no lo encarezco en aquello no se le concedia, pidió con
decir, que fué este razonamiento una grandísima instancia suplicando mu
de las cosas mas estraordinarias y chas veces, que al menos desde
raras, que en semejantes materias se le atasen las manos con la soga, y le
han oido en nuestros tiempos. Verda pusiesen otra al cuello, porque queria
DON MARTIN DE ACUÑA. 354

gozar de verse aquella noche atado, y manera que fué haciendo una como pa
cargado de sogas, ya que otra cosa no ráfrasis, declarándole todo por via de
tenia en qué padecer hasta que le meditacion, y coloquio con nuestro Se
quitasen la vida; y diciéndole yo que ñor con tan grande concierto y órden,
nos alegrábamos y gozábamos todos y con tanto sentimiento y ternura, que
con la merced tan soberana que nues me puso en grande admiracion. Asi le
tro Señor le hacia, y que aquellos de dije: no pensé que sabia V. tanto, ni
seos , aceptaba Dios, y le eran muy que habia oido tantas cosas. A esto me
agradables, mas que la ejecucion, se respondió: asi, es verdad, que yo no
quedase para su tiempo que no estaba sabia, ni habia oido nada de esto que
muy lejos. he dicho, por que no lo he dicho yo,
Oyendo esto se mostró desconsola sino Dios es el que me ha movido mi
do por no concederle lo que pedia y lengua, y aunque todo cuanto hablaba
alzando las manos se comenzó á dar era de Dios, señaladamente dijo algu
muy recias bofetadas, y luego echó nas razones que me causaron grande
las manos á las barbas y mesándoselas sentimiento, y por esto las pongo aqui.
decia á voces: Oh traidor! ¡Oh malva Yendo hablando, dijo con grande aten
do! ¡Oh miserable y desventurado pe cion y ponderacion: quien quisiese sa
cador que tantos pecados has hecho! ber á que saben pecados entre ahora
Acudí á él y quitéle las manos de las en mi corazon, y diciéndole uno de los
barbas, que las sacó llenas de ellas, y alguaciles, que Dios se contentaba con
viendo que le estorbábamos lo que ha que le pidiésemos perdon con arrepen
cia y que nos espantábamos dijo: no timiento, enclavó en él los ojos, y con
piense alguno que hago esto por algu una profunda consideracion de lo que
na desesperacion, que no lo hago sino le iba diciendo, dijo: quien quiere sa
con mucha confianza en Dios y por cas ber como quiere Dios que le pidamos
tigar y atormentar este malvado cuer perdon, pregúnteselo en este paso en
p0 en lo que puedo, porque el demonio que estoy á mi corazon que él lo piensa
no tenga parte en el alma, que es de bien.
Dios, que ha de usar de su misericor Haciendo otra vez actos de contric
dia conmigo. cion, derramaba muchas lágrimas y
Persuadíle que aunque aquello era daba muchos suspiros y estando en es
bueno, pero que la obediencia era me ta disposicion, dijo: si tanto consuelo
jor y que le pedia me obedeciese en no recibo de llorar mis pecados, ¡qué será
acer cosa semejante. Respondióme: si veo á Dios en la glorial y mirando á
pues es mejor eso sea asi; pedíle comiese una imágen de Nuestra Señora que te
un bocado, dijo: de muy buena volun nia al niño Jesus á sus pechos, le
tad que ya yo siento alguna necesidad, dije que mirase como nos lo criaba
asi lo hizo porque comió todo lo que para nuestro remedio: respondióme:
e dimos, diciendo que aquellos eran ¿y que leche? Con esa leche nos lo
los postreros bocados que habia de co está endulzando, y haciendo sabroso.
mer, y el último refrigerio que habia Díjome otra vez: paréceme, Padre, que
de dar á aquel desventurado cuerpo; me ha dado Dios tanta confianza de mi
y no me edificó y consoló menos en es salvacion, que me parece que me ha
to que en todo lo demas. Ni mostró cerrado las puertas del infierno á cal
aqui menos el espíritu que habia co y canto. Díjele que se consolase mucho
brado, porque en todos aquellos tres en tener dos niños en el cielo que se
dias un solo punto ni momento habia le murieron muy pequeños, y empezó
podido dormir, ni pasar bocado, á lo me á preguntar si sabrian el trabajo en
menos tan pocos, que no creo fué una que él estaba, si se hallarian á su
onza, todo el sustento que en todo este muerte y otras cosas semejantes á es
tiempo tomó. Rezéle algunas cosas, y ta, respondíle á ellas, y declarándo
rezó él el rosario de Nuestra Señora: selas quedó con grandísimo consuelo
despues comenzó á leer Psalmos de los su alma, de manera que comenzó á ha
Penitenciales y diciendo el del Misere blar con ellos con una fé y certidum
re, le dije lo rezase muy despacio, bre como si de alli los viera con los ojos
ponderando cada palabra. Hízolo de corporales estar allá en el Cielo delans
352 CAUSAS CELEBRES. \

te de Dios, encomendándose á ellos con de corazon y juntamente esfuerzo de


palabras de devocion y ternura y sin ánimo con que lo oia todo y respondia
pensar acabar les decia: hijos de mi á todo: y en acabando yo tomó él la ma
alma, de mi corazon, hijos del mas mal no, y hizo otra recomendacion en su
padre de cuantos hay en el mundo; propio nombre, tan sentida, tierna y
aunque sois hijos de tal padre, ya no os devota que nos puso espanto y admi
daña mi maldad y desventura, pues racion, ofreciendo á Dios sus pecados
tan en salvo estais. Hijos, no me ne para que se los perdonase, ofreciéndo
gueis por padre, pues al fin nunca os le para esto su misma pasion y muerte
negué por hijos, en fin soy vuestro pa sacratisima , , confesando cuantos y
dre y salisteis de mis entrañas; hijos, cuan graves han sido, doliéndose de
no descanseis, no pareis un punto, id ellos entrañablemente ofreciendo, á
venid de Dios á los Santos, y de los Nuestro Señor que si para que se los
Santos á Dios, negociadme mi salva perdonase fuera menester que todos
cion, hablad á la Santísima Vírgen, ha los pregonara delante de todo el mun
blad á todas las Vírgenes, andad de do, que él lo hiciera sin ninguna difi
Santo en Santo pidiendo á todos sus cultad, dando gracias á nuestra Seño
oraciones, y ayuda para este desven ra, á todos los Santos, á todos los án
turado de vuestro Padre. Hijos, mirad geles pidiéndoles que legiones de ellos
la afliccion y peligro en que estoy, mi estuviesen alli con él para le ayudar y
rad que por momentos se me va aca defender, y otras muchas cosas de gran
bando la vida; hijos, no me olvideis en consuelo, dichas todas con estraño fer
el purgatorio. vor y fuerza de espíritu.
Otras veces hablaba con cada uno Mostró todos estos dias una fé y
de por sí, nombrándole por su nombre, devocion con las misas, y un deseo de
diciéndole lo que le quiso, lo que le re ue le ayudasen con decirle muchas
galó, lo que padeció en curarle, las espues de muerto, que es cosa increi
lágrimas que le costó viéndole morir, la ble y que no se puede decir lo que en
soledad y desconsuelo con ". le dejó este particular decia, y pidióme que
muriendo; luego se volvia al otro y le pues era su padre espiritual que no me
decia otras cosas semejantes á estas, avergonzase andar de uno en otro pi
recontándole y como trayéndole á la diendo que le dijesen misas y nombrán
memoria cosas muy particulares que dome en especial cuantas personas co
con él habia pasado de pena y dolor nocia para que en su nombre se las pl
por haberle acusado tanto y durában diese, y que se consolaba mucho en sa
le estos coloquios por grandes ratos, ber que en el otro mundo habia de en
tornando á ellos de cuando en cuando, tender quién le hacia amistad en rogar
hablándoles y diciéndoles muchas pa á Dios por su ánima, y ofrecerle sufra
labras dulces pidiéndole le ayudasen. gios.
Pediales particularmente muchas Díjome tambien que aunque ruin,
veces esto, que trujesen muchas le siempre habia sido inclinado á hacer
giones de ángeles para que ayudasen bien á los pobres, y por esto y por la
á un hombre tan flaco y pobre como él, devocion que tambien tuvo siempre
y que tanto tenia por que temer la ira con nuestra Señora, estaba muy confia
de Dios. Finalmente fueron estos ra do que Dios y todo el cielo se compade
zonamientos una de las cosas de mas cerian de la pobreza de su espíritu; y
devocion y ternura, y en que mas lá bien lo mostró en este tiempo por lo
grimas él derramó, y con él todos los que creo fué tan favorecido de su Divi
que le oimos de cuantas hizo y dijo en na Magestad en aquella postrera hora.
todos aquellos dias. Hacia preguntas de como se cono
Recéle la recomendacion del alma, cian los del cielo, como se hablan, co
con que la Iglesia ayuda á sus hijos pa mo veian á Dios, y acerca de los del
ra despedillos de esta vida y encami purgatorio qué maneras de penas pa
narlos á la otra delante de todos los que decian, y si eran como las del Infierno,
alli podiamos hallarnos, sin ser en mi y cuanto podrian estar allí las almas, y
mano dejar de derramar muchas lágri dónde estaba el purgatorio, y que cer
mas viendo las suyas y el sentimiento tidumbre podria haber de que á uno le
º
DON MARTIN DE ACUÑA. 353
- -=

eran perdonados sus pecados, y de la llos hombres, y que aun de esto no ha


incertidumbre de las indulgencias. A bia tratado hasta como veinte dias an
todo le procuré satisfacer y dejar ani tes que me prendiesen.
mado y consolado. Absolvíle por virtud de la bula de
Llegóse la mañana, y subió el algua cruzada y comuniquéle la indulgencia
cil y en sintiéndole subir se anticipo él plenaria que por ella se concede en
mismo y le preguntó si era hora, res aquel artículo, habiéndole primero re
pondióle que sí. Dijo con grande ánimo: conciliado sacramentalmente y reser
entre vd. señor secretario, y asi como vado la absolucion para la postrera
le vió entrar le saludó, diciendo: sea vd. hora.
bien venido, no se turbe vd. que yo Hecho esto él mismo dijo: entre ese
muy animado y esforzado me siento buen hombre, bien puede entrar.
para morir, y en venir vd. á darme la Entró el verdugo, espectáculo tan
muerte me viene á hacer muy buena horrible para él pocas horas antes,
obra, porque esta sentencia, Señor, del miróle enclavando los ojos en él y en
cielo viene, y asi la recibo yo, pues es los instrumentos que traia, y dijole:
para castigar este cuerpo, porque no se seais bien venido, hermano mio.
condene esta alma: vd. diga á todos El hombre se encogió y dijo: señor,
esos señores que les beso las manos y yo soy mandado. Díjole el paciente que
que me perdonen que algunas veces he venia á hacer una obra muy meritoria,
hablado contra ellos con alguna cóle y mirad que os la galardonará Dios, por
ra, que si me veo con Dios yo roga ue venis átomar el castigo y venganza
ré allá por todos ellos á su Divina Ma— ¿ mas mal hombre que nació y mas
gestad. pecador, ¿esa tabla es para echarme en
Yo he tenido hasta ahora una nece ella? porque yo mismo me tenderé en
dad deseando y pidiendo que no oyese ella si es menester.
la sentencia, mas ahora digo que la lea Respondióle: señor, no es menester
vd, una y muchas veces, delante de tenderse vuesa merced.
todos, y si es menester á pregones, por Pues hermano, haced vuestro oficio,
ue quiero oir lo que por tantos peca ponedla como ha de estar.
os he merecido. Diciendo esto llamónos á todos los
Díjolo con un esfuerzo que siempre presentes, y á cada uno de por sí nos
que me acuerdo me admiro; ¿ dió un abrazo, que nos quebraba los co
le el secretario que ninguno habia de razones, y decia, adios, adios, herma
estar presente al oirla, y asi nos sali nos, hasta la otra vida; adios, hasta la
mos y se la leyó tan á solas, y en se eternidad.
creto que nadie sabe lo que contenia ni Abrazándome á mí el primero me
or que delito le sentenciaron, ni quien encomendó su alma para que hiciese
e vió. -
bien por ella. Ya que me apartaba del
Acabándosela de leer me llamó á mí me tornó á abrazar, arrancándosele el
el Secretario y delante de mí la aceptó alma de dolor y pena, casi sin poder
diciendo: digo que la oigo, y obedezco, acabar de pronunciar lo que decia, me
como sentencia muy cristiana, muy dijo: padre, este abrazo dé vuesa mer
justa, y muy misericordiosa, y asi lo ced á aquella desdichada señora por
firmo de mi nombre, y tomando la plu mí, pidiéndola perdon de tantos años
ma en la mano puso su firma. de mala compañía.
Dicho y hecho esto entraron los de Y acabado que hubo de abrazarnos
mas alguaciles, y guardas, y delante á todos sin que nadie, sino el amor que
de todos dijo: para el paso en que estoy el corazon tenia se lo acordase, dando
y para la cuenta que voy á dar á Dios un recio gemido, que fué bramido que
digo que jamás en toda mi vida tuve á todos nos hizo encoger, dijo: hijo de
determinacion ni voluntad, ni propósi mis entrañas, si la bendicion de tan
to de hacer traicion á Dios, ni al Rey, mal padre fuera bendicion, yo te la die
ni á la Iglesia, ni á otra cosa semejante, ra ahora, más no será sino maldicion,
y que estas cartas que escribí, no las y por eso no quiero dártela; détela Dios
escribí con otra intencion que con en del cielo, la bendicion de la Santísima
gaños y palabras sacar dineros de aque Trinidad sea siempre contigo, y bendí
45
354 CAUSAS CELEBRES,

gante los ángeles, y hágate Dios suyo Díjele el responso, y creo y confio
para que te salves y no te veas como este en Nuestro Señor que descanse ya y
desventurado de tu padre. Queda con con mucha gloria y que me ha de ayu
Dios, hijo mio, hijo mio, queda con Dios! dar siempre, asi me lo prometió muy de
Puso los ojos en el verdugo que es verás y lo mismo á todos los que le
taba aderezando sus instrumentos, y
Vl 01a.
asen
con sacrificios despues de su
alzando luego los ojos al cielo, juntas
las manos, dijo: Señor mio Jesucristo, Y asi suplico á V. R. por amor del Se
suplico á Vuestra Divina Magestad una ñor le mande decir alguna misa porque
merced por la última que os suplico en será una limosna muy grata á Nuestro
esta vida, y es que V. M. sea servido Señor, y espero en su Divina Magestad
que á este buen hombre se le turben que será muy bien remunerado del
y entorpezcan las manos y que no acier mismo por quién se ha de hacer, y á
te á hacer bien su oficio para que el tor mí me encomiende V. R. Señor en
mento de mi muerte sea mas largo, que sus sacrificios y oraciones. De Madrid
siquiera dure un año para que asi mas y de 30 de marzo 1585.
atormentado, pague yo en este cuerpo
lo que debo y se salve mi ánima. Esta causa y ejecucion permaneció
En esto llegó el verdugo, y le ató tan secreta que aun existirian desco
las manos una con otra, mas no de ma nocidas de todos á no ser porque algu
nera que no las pudiese levantar juntas na de las poquisimas personas que in
en alto, y queriéndole poner los corde tervinieron en ella, dejó algunas me
les á la garganta, le dijimos que se cu morias anónimas que se con servan en
briese porque no viese tal espectáculo; tre los manuscritos de la Biblioteca
dijo que no, que él lo queria ver. Im nacional, de donde hemos sacado estos
portunámosle hasta que él mismo tomó apuntes.
el lienzo y se cubrió los ojos, mas de Llevó Felipe II hasta tal punto su
manera que se cayó luego de ellos, y disimulo en este asunto que para des
diónosle diciendo: no se quiere tener, orientar á los que hubieran podido
ni es menester, yo lo quiero ver, llegad, transpirar algo de él por aquel mismo
hermano, haced vuestro oficio. tiempo, concedió sin mérito alguno os
Llegó y púsoselo como habia de es tensible al hermano del capitan Acuña,
tar, y viéndose asi, dijo con un las que solo era un caballero noble cuyo
timero grito: cristianos, haced compa mayorazgo habia venido muy á menos,
sion de mí; hermanos, ayudadme con el cargo de castellano del presidio de
Dios misereminimei, meseremimi mei, Milan.
salten vos amici mei, quia manus domini Con ser esta una de las causas mas
tetigit me. importantes y curiosas, en ninguna de
Púsele muchas cuentas benditas al las historias de España publicadas hasta
cuello y dijo muchas veces Jesus María, hoy, inclusa la célebre y mas comple
haciéndole que dijese algunas pa ta de todas, la del Excmo. señor don
ias de Santos para este trance, y úl Modesto de la Fuente, hemos visto he
timamente el Credo que dijo con gran cha la menor mencion de ella.
de sentimiento, hizo el verdugo su ofi Tanto fué el secreto que se guardó
cio, con mucha brevedad, y lo que nos en los procedimientos de ella que du
admiró á todos fué que desde el princi— raron cerca de siete meses, porque la
pio al fin jamás moviese el cuerpo, ni justicia de Felipe II, como habrán visto
pies ni manos, brazos ni cabeza, ni hi nuestros lectores, era siempre lenta
ciese mas movimiento que si fuera de aunque segura, y tanto fué el cuidado
mármol, pues solo en faltarle la respi que se puso en ocultar la ejecucion ter
racion se conoció cuando era muerto. ible
de Torrejon de Velasco.
Requiescat in pace.
DON RODRIGO CALDERON,
CNTE DE LA CIMA, MARQUÉS DE SIETE IGLESIAS,

SECRETARIO DE ESTADO DE FELIPE III.

(1891.)

A la muerte de Felipe II sube al los años; la debilidad de carácter ja


trono su hijo Felipe III, jóven de veinte más, y es el mas fatal de los defectos
años de edad. Su inesperiencia y la de de un rey.
bilidad de su carácter no le hace á Nunca se vió un ministro de repen
propósito para contener la decadencia te levantado á tanta altura como se vió
que en los últimos años de su padre co el marqués de Denia, creado poco des
menzó á sentir la monarquía española pues duque de Lerma, en cuya mano
que habia dado la ley y llenado de cons se concentraban todos los destinos de
ternacion á todas las potencias de Eu esta inmensa monarquía. Llegó la ab
ropa. dicacion de la dignidad real hasta tal
De la actividad incansable de Feli punto que refiere Gil Gonzalez Dávila,
pe II,¿ de repente á la inercia uno de los mas autorizados cronistas
y flojedad de Felipe III. Felipe II, que de Felipe III, que este soberano le fa
todo lo escribia por su propia mano, cultó para que pudiese recibir los pre
que todo lo despachaba por sí, que él sentes que le hiciesen, quedando asi
solo trabajaba mas que todos sus con autorizada la corrupcion y la inmorali
sejeros y secretarios, fué reemplazado dad, y sancionada la pasion dominante
en el trono por un rey que para liber de la codicia á que se entregó este mi
tarse de las molestias que llevaban con nistro, sin freno ni miramiento.
sigo las riendas del gobierno del estado, Comenzó su gobierno el marqués de
comenzó por traspasar al favorito, el Denia alejando del lado del nuevo rey
mismo que habia tenido cuando prín á aquellos ministros probos y laborio
cipe, toda su autoridad. Dió un decreto sos que habian merecido la confianza de
que todos los consejos y tribuna Felipe II, y que aquel monarca al mo
es del reino obedecieran lo que en su rir, con tanto empeño, y previsor de lo
nombre mandase don Francisco de Ro que iba á suceder, habia recomendado
¿ Sandoval, marqués de Denia, caba á su hijo.
lerizo suyo cuando solo era príncipe de Dos enlaces habia dejado dispuestos
Asturias, y á quién de repente elevó al Felipe II á su muerte, el de su hijo Fe
cargo de primer ministro de su vasta lipe con Margarita de Austria, y el de
monarquía. - su hija Isabel Clara Eugenia con el ar
La inesperiencia se disminuye con chiduque Alberto, á quién habia dado
356 CAUSAS CELEBRES
====-- =
la corona de los Paises Bajos con la jardo con el dinero que traía de la
cláusula de reversion á la España si Nueva-España; por último, le dió el
morian sin sucesion. Asi terminó des nombramiento de duque de Lerma, tí
pues de haber hecho correr arroyos tulo con el que se le conoce, y que ha
de sangre los sucesos de Flandes, conservado en la historia. Tambien re
aquel rey emancipando aquellos esta cibió como merced las escribanías de
dos tan costosos á la nacion espa Alicante, y la de sacas de Andalucía;
ñola. las alcaidías de Velez y del castillo de
Ambos enlaces debian verificarse Burgos; los pingües productos de la
en un mismo dia, el 30 de setiembre almadraba de Valencia; setenta mil
de 1598. ducados de renta en Sicilia; el dominio
El rey salió á esperar á la reina de muchas villas y lugares en Aragon,
á Valencia , yendo á aposentarse á Castilla y Navarra; de manera, que en
la ciudad de Denia, que daba nom breve tiempo fué el duque de Lerma
bre al título de su ministro y favorito. uno de los mas poderosos potentados
El marqués de Denia, afable, dulce que hubo en Europa, mostrándose en
y cortés en su trato, habia procurado su casa mas , lujo y ostentacion que
captarse la benevolencia de los gran en el palacio del mismo rey.
des, distribuyendo inconsideradamen Su hijo fué nombrado marqués de
te y con profusion gracias; y para ase Cea, su nieto conde de Ampudia, la
gurarse la proteccion del clero, enton duquesa de Lerma camarera mayor de
ces muy fuerte y poderoso, mostró una la reina, que le regaló la magnífica car
decidida aficion á crear y dotar conven roza que á su paso por Italia le habia
tos, iglesias y hospitales. ofrecido el duque de Mantua.
En solo los tres primeros meses de En breve se murmuró por el pueblo
su ministerio habia creado mas genti y los grandes de que el ministro recibia
les—hombres, y dado mas hábitos de cuanto queria dársele. Llovieron, pues,
las órdenes militares que Felipe II en sobre él desde entonces los obsequios
diez años. de dinero en gruesas cantidades, que
Arbitro de los emplos públicos, admitia no solamente de los particu
dueño de distribuir sin responsabilidad lares sino hasta de las mismas provin
ninguna las gracias y los tributos del cias, aceptando á título de servicios.
estado, el duque de Lerma cuidó pri cuantiosos donativos en metálico, que
mero de formar su fortuna. Asi es, que sin causa ni título alguno le ofrecieron
mientras se apresuraba á reducir á la las córtes de Cataluña y de Valencia.
nulidad y separar á los hombres de mé Los historiadores contemporáneos
rito y saber que mas habian brillado en afirman, que solo de los donativos
el reinado de Felipe II, se afanaba por llegó á, reunir el duque de Lerma la
otra parte en engrandecer su familia, suma de cuarenta y cuatro millones
y las de sus parientes. Ninguno quedó de ducados, cuatrocientos ochenta y
pobre de estos, para que ninguno tu cuatro millones de reales!!!
viese que pedirle é importunarle. Activo en colocar en los primeros
Durante el viage de Valencia para puestos á sus parientes, aprovechó la
recibir á la reina, habia sido nombra vacante de la mitra de Toledo por la
do por el rey snmiller de corps y ca muerte de don García de Loaisa, anti
ballerizo mayor; habia recibido el se guo preceptor ayo de Felipe III, para
ñorío de varias villas; se le habia ponerla sobre la cabeza de su tio car
concedido una escribanía, que vendió nal don Bernardo de Sandoval y Rojas,
en Sevilla en ciento treinta y tres mil á quien hizo diese ademas el rey el Ci
ducados; la encomienda mayor de Cas garral.
tilla con diez y seis mil ducados de Era el verdadero señor de la monar
renta; la de Calatrava en su hijo con quía española.
la renta de diez mil; sin contar con Llegó hasta tal punto su poder y
varios regalos que le hizo Felipe III, tanto se rebajó la magestad de Feli
entre otros el de cincuenta mil duca pe III, que habiendo casado á su hija
dos cuando fué á anunciarle que habia mayor el duque de Lerma, doña Jua
llegado á Sevilla la flota de Luis Fa na, con don Manuel Perez de Guz
DON RODRIGO CALDERON, 357
=,

man, conde de Niebla, hijo del duque ciones, su precoz inteligencia, cuando
de Medinasidonia, fué el mismo rey perdió á su madre.
acompañando á la novia al estribo de Viéndose su padre viudo, con un
su carroza, desde el palacio hasta su niño y lejos de su patria, se volvió á
posada que la tenia en la casa del du Valladolid, de donde era natural y de
que de Arco, plaza de San Salvador, buena familia y en donde poseia bas
hoy de la Villa. tante hacienda para pasar cómoda y
- Si esto podia tener disculpa como holgadamente su vida retirándose de
un acto del genio galante del rey de que los azares de la guerra.
dió tantas pruebas en sus aventuras, A poco tiempo contrajo segundas
no la tiene el que cuando la duquesa nupcias, y el niño don Rodrigo en lu
de Lerma pasó un año despues á Se gar de los tiernos halagos de una ma
villa, á asistir al parto de la misma dre, esperimentó el trato duro y desa
condesa de Niebla, su hija, espidiese brido de una madrastra.
Felipe III un real decreto dirigido al El jóven Rodrigo de natural altivo,
asistente y ciudad de Sevilla, para que llevaba mal el yugo de la madrastra,
festejasen y se hiciesen funciones al y su padre, que le queria mucho, que
paso de la marquesa de Denia , por deseaba evitar las contínuas disensio
aquella ciudad «dándole cuenta de lo nes que por él alteraban frecuentemen
que hiciesen, y diciéndoles que toda bue te la paz doméstica, trató de buscarle
na acogida y demostracion que por ella una colocacion proporcionada á su edad
hiciesen, seria en señalado sérvicio suyo, y noble linage, y que pudiese propor
agradeciéndoselo mucho por la estima cionarle adelantos en el porvenir.
cion que hacia de la persona de la mar— Colocóle de page del vice-canciller
quesa, y lo bien que su marido le ser de Aragon. Alli permaneció á su ser
t) (1.)) vicio algunos dias, pero aquel protec
La ciudad la recibió con funciones tor no era bastante para don Rodrigo.
cual si fuera una reina, , y la llenó de Tuvo su padre ocasion de hacerle en
resentes, de joyas, y de dinero. Sa trar en abril de 1598 de page de don
ian que nada agradaba tanto al mi Francisco de Rojas, marqués de Denia,
nistro como los regalos. en quien empezaba ya á descubrirse
El duque de Lerma, hombre tan por los inteligentes cortesanos el favo
poco apto para el gobierno como el rey, rito de Felipe III cuando fuese rey, el
ronto se vió á la vez dirigido por otro futuro duque de , Lerma, y el hombre
avorito suyo, hombre audaz, de inteli sobre cuyos hombros iba aquel indo
gencia, resuelto, y de nacimiento os lente príncipe á descargar del modo
curo aunque noble, que de hijo de un que hemos visto todo el inmenso peso
pobre soldado se elevó á secretario de de la gran monarquía de dos mundos.
Estado, conde de la Oliva, marqués de Tenia don Rodrigo grandes talen
Siete Iglesias, y uno de los mas ricos y tos, figura simpática y agradable, y
poderosos señores de la España. singular habilidad para ganar el afec
Este hombre que debia presentar to de aquellos con quienes trataba.
al mundo un ejemplo terrible de la Desde luego se hizo dueño del corazon
inconstancia de la fortuna, de la ins del duque de Lerma.
tabilidad del poder y de la vanidad y Era sumamente modesto, de muy
miseria de las grandezas humanas, fué buen natural, algo tímido, y asi se
don Rodrigo Calderon!!! avenia mal con las ruidosas travesuras
Era hijo de un noble capitan, don de los otros pages sus compañeros,
Francisco Calderon, que lo tuvo en que como jóvenes, y atolondrados, y
1574 en una señora alemana en Am viendo su cortedad le hacian el objeto
beres llamada María Sandelin, y con contínuo de sus burlas. Dolíale tanto
la que para legitimar el fruto de sus el verse chasqueado por estos, que pa
amores se casó poco tiempo despues ra evitar sus molestas chanzas estaba
del nacimiento de don Rodrigo. casi siembre en presencia de su amo,
Apenas contaba ocho años el niño y con tanta frecuencia, que muchas
Rodrigo, y en su infantil travesura de veces no se atrevia á ir al comedor ni
jaba ya adivinar sus buenas disposi salir de la sala sino acompañado del
358 CAUSAS CELEBRES.
=

maestre de sala ó de alguno de los Colocado ya en esta posicion podia


gentiles hombres, á quienes los pages aspirar ya á los mas altos empleos, y
mirasen con respeto. El duque de Ler en breve debia recorrerlos todos.
ma, º veia tal asistencia y tanto de Tanta y tan rápida fortuna lo des
seo de estar cerca de su persona en vanecia. Avergonzado en un principio
don Rodrigo, juzgó que era afecto lo de su oscuro nacimiento, procuraba
que solo era miedo á sus compañeros. ocultarlo con el mayor cuidado, dán
Comenzó á mirarlo con singular ca dose por hijo de un potentado flamen
riño, tenia en él mayor confianza que co. Asi es que en aquella época se pu
en los demas, y le hizo su page de bol blicó contra el privado del rey y el fa
sa, encomendándole algunas cosas que vorito del privado la siguiente sátira
con su talento y singular actividad des en que casi le pronostica don Luis de
pachaba pronto y á gusto de su amo. Góngora, el afamado poeta de aquella
Don Rodrigo tenia gran despejo, á época, la catástrofe que andando el
su capacidad reunia el arte tan precio tiempo habia de sobrevenirle.
so en un cortesano de saber lisongear Circuló profusamente, y se leyó con
sin dejarlo conocer, asi es que encan avidez en la córte y en el pueblo la si
tado el duque de Lerma, vió en él un guiente letrilla:
hombre á propósito para ayudarle en
la inmensa tarea que pesaba sobre él,
¿Arroyo, en qué ha de parar
y procuró adelantarle en su carrera. Tanto añhelar y subir;
Hizo que el rey le nombrase su Tú por ser Guadalquivir,
ayuda de cámara. Este fué el ¿ Guadalquivir por ser mar.
Compañero, en acabar
escalon de su rápida y estraordinaria
fortuna. Sin caudales y sin nombres
Para ejemplo de los hombres.
No agradó menos don Rodrigo al
rey que habia agradado á su ministro:
llegó á tomar tal ascendiente sobre el Hijo de una pobre fuente,
Nieto de una dura peña,
espíritu del duque de Lerma, que A dos pasos los desdeña
aquel page tímido que tenia que huir Tu mal nacida corriente:
de sus compañeros fué el verdadero Si tu ambicion lo consiente,
dueño de la casa del ministro. Nada se ¿En qué imaginas me dí?
hacia, nada se disponia en el la que no Mormura y sea de tí
Pues que sabes mormurar.
fuese por don Rodrigo.
Tenia como hechizados con su trato
al rey y al duque, y esta espresion fi ¿Arroyo, en qué ha de parar
Tanto anhelar y subir;
gurada mas tarde la tomaron como real Tú por ser Guadalquivir,
sus enemigos, é hicieron de ella un ca Guadalquivir por ser mar?
pítulo gravísimo de acusacion.
Con el favor del duque y su empleo ¿Qué dias tienes reposo,
en palacio logró contraer un matrimo A qué noche debes sueño?
nio muy ventajoso con una jóven muy Si corres tal vez risueño,
principal de Cáceres, doña Inés de Siempre caminas quejoso.
Mucho tienes de furioso,
Vargas, que era señora de la Oliva, da
ma de relevantes prendas, si bien no Aunque no en el tirar cantos,
Asi tropiezas en tantos
muy agraciada en su figura. Cuando te quies levantar.
Cada dia iba creciendo en el favor
del duque, y éste, acumulando sobre ¿Arroyo, en qué ha de parar
él las mercedes que conseguia del rey. Tanto anhelar y subir;
En poco tiempo le concedió las diver Tú por ser Guadalquivir,
sas cosas que le pidió, sin causa ni Guadalquivir por ser mar?
merecimiento alguno ostensible. Pri
mero le dió el hábito de caballero de Si tu corriente confiesa
Santiago, con la rica encomienda de Sin intermision alguna,
Que la cabeza en la cuna
aquella órden en Ocaña, y á poco Y el pie tienes en la huesa:
tiempo despues le hizo conde de la ¿Qué fatal desdicha es esa
Oliva. En solicitar tu daño?
DON RODRIGO CALDERON. 359
d-- R==

Pésame que el desengaño go y la encomienda mayor de Aragon,


La vida te ha de costar.
no tanto por su pingüe renta como por
¿Arroyo, en qué ha de parar el tratamiento de señoría, cosa muy
Tanto añhelar y subir; apreciada entonces, como comun es
Tú por ser Guadalquivir, ahora, y no queriendo su padre subirá
Guadalquivir por ser mar? mas se fué á vivir tranquilo á Valla
dolid.
Cada dia crecia el favor del duque Todo esto era aun poco para su am
de Lerma con el rey, y cada dia crecia bicion y codicia. A pesar de su rápido
tambien el de don Rodrigo con el mi enriquecimiento, y su lujo inmoral,
nistro. que habia hecho nacer la corrupcion
A poco tiempo de ser conde de la en los mas altos funcionarios, quiso
Oliva, fué nombrado capitan de la el duque de Lerma hacer un ejemplar
guardia alemana , y tudesca, alguacil que le captase popularidad en el vul
mayor de Valladolid, mayordomo de go, y sirviese á los adelantos de su fa
la ciudad, alcaide de su real cárcel. Se vorito Rodrigo Calderon.
le concedieron dos regidurías con voz Un dia, en la ocasion solemne de
y voto y primera antigüedad en Valla un torneo á que asistieron los reyes, y
dolid, y ser correo mayor de la misma; todos los grandes y señores de la cór
se le otorgó la gracia de un maravedí en te, hallándose sentado entre el duque
cada bula de la Cruzada, de las que se de Lerma V el conde de Miranda el
imprimian en dicha ciudad, lo que le conde de Villalonga y de Villafranque
valia seis mil ducados al año, un bal za don Pedro Franqueza, secretario de
con perpétuo en la casa de ayunta Estado, entró don Rodrigo Calderon, le
miento, un aposento ó palco en el tea arrancó de alli, y lo prendió en nombre
tro de Valladolid, y otro en el de la del rey, mandándole preso á Torrelo
Cruz. dones. El conde de Villalonga habia
Fué nombrado patrono del convento sido aprisionado por haberse enrique
de Portaceli y de la capilla de Nuestra cido demasiado de priesa á costa del
Señora de la Merced en el convento de Estado. Fué confiscada su hacienda, y
Madrid, regidor de la ciudad de Soria. asombró la cantidad de dinero y joyas
Tenia , ademas dos regidurías en la que se le cogieron y hallaron enterra
ciudad de Plasencia con voz, voto y an das en su casa. Era tan escandalosa su
tigüedad, la depositaría de la misma. rapacidad, que hasta los muchachos
Le hizo el rey merced de la mitad cantaban por las calles: Mas quiero mi
del buceo de lo que se sacaba del mar ¿ que la hacienda de Franqueza.
iciéronsele hasta cuatrocientos sesen
cuando se perdian las galeras cargadas
de oro y plata que venian de las Indias. ta y siete capítulos de cargos, salien
Tenia el derecho del palo del Brasil do condenado al pago de un millon
que venia de Lisboa y que valia doce cuatrocientos seis mil doscientos du
mil ducados al año. Se le concedió el cados para la corona real, (es decir,
privilegio de que tratase en las pie quince millones cuatrocientos sesenta
dras de tahona y de barberos que ve ocho mil ochocientos cuarenta y nue
nian de fuera de España para enviará ve reales!!!) á privacion de todos sus
la India Oriental, reuniendo en todas honores, y reclusion perpétua en las
estas cosas una renta de mas de dos— Torres de Leon á donde fué traslada
cientos mil ducados (dos millones dos do (1609).
cientos mil reales). Se dió este ejemplo de severidad
Hasta á un hijo suyo de edad de que hubiera podido ser una prove
año y medio, se le confirió el hábito chosa leccion en aquellos tiempos de
de la gran cruz de San Juan. profunda inmoralidad, para nombrar
A la muerte de su madrastra se re por su sucesor á don Rodrigo, cuya
concilió con su padre, y le hizo dar el opulencia era un escándalo, y que ad
hábito de San Juan y la alcaidía de quirida por no mejores medios, eclip
esta órden en Consuegra, y despues le saba el brillo de los mas poderosos
hizo nombrar teniente de su compañía grandes.
alemana, y le dió el hábito de Santia Ministro ya del rey y encargado del
360 CAUSAS CELEBRES.
E===

despacho de los papeles, como entonces truir las ermitas que están en el de
se decia, concentróse en las manos de sierto de las Batuecas, ese delicioso
don Rodrigo Calderon cuanto era rela oasis donde se consagraban , los hijos
tivo á las mercedes, á las cosas de gra del Carmelo á la oracion V al silencio.
cia y los negocios de justicia, y lo que Tambien el convento del Cármen de
antes era no pequeña ocupacion de Pastrana fué levantado á sus espensas,
muchas y entendidas personas, quedó y es un monumento de su devocion á
á cargo y direccion de un hombre solo. María. Don Rodrigo era religioso hasta
Tanto favor con el rey, y mas aun la supersticion, pagando el tributo á
con el ministro duque de Lerma, ver la ignorancia de su tiempo, pues al
dadero árbitro de los destinos de la paso que se le ve implorar á Dios, y
España, le deslumbraron, se llenó de levantarle templos para que le manten
vanidad y de orgullo. Haciendo alarde ga en su estraordinaria fortuna, acude
de su gran poder daba audiencias como tambien á los reprobados medios de la
un soberano, y aun estas las dificulta mágia demasiado crédulo, debilidad y
ba. Se rodeó de una brillante córte de contradiccion inconcebible en un hom
aduladores, desplegó un lujo régio, bre de su despejado talento.
igualó ó mas bien escedió en magnifi Lo vendia todo, y se desprendia de
cencia al mismo duque de Lerma de parte de su fortuna en honor de Dios
quien era el satélite, y devorado de y en alivio de los pobres. Estraña
igual codicia que éste, vendia , sus fa mezcla de cinismo y de , devocion!
vores, y los pobres, aunque reclamasen Cundía entre el pueblo la murmu
el corto estipendio comprado con su racion del escandaloso tráfico que de
sangre en los campos de batalla, no todo se hacia en la córte, indignábanse
hallaban acceso cerca de él como los las gentes, corrian aunque secreta
opulentos. Pagaba pocas visitas, daba mente sátiras picantes, infamantes li
rienda suelta á su carácter violento, no belos contra el ministro duque de Ler
usaba de ninguna condescendencia ni ma y su favorito, en que se les trata
aun con los ¿ y asi se hizo odio ba indignamente, y se les designaba
so á todos. Lleno de ambicion tomaba como á ilustrisimos ladrones.
parte en todas las intrigas de la córte, El pueblo y los grandes que tan á
y se jactaba de hacer sentir su gran mal llevaban la privanza de el duque
poder con su trato áspero y desabri de Lerma con el rey, no se resignaban
do, pues el duque de Lerma se descar— á sufrir la privanza de don Rodrigo con
taba de cuantos en no siendo en un el ministro, privanza mil veces para
negocio que á él interesase, se dirigianellos mas perjudicial.
á él, y se los enviaba á don Rodrigo. Felipe II en su profunda política ha
Sin el orgullo y el desenfrenado bia tratado como un apoyo ¿ Su trOnO
amor al lujo, don Rodrigo hubiera he de ensalzar á la nobleza que en los
cho brillar virtudes que aquellas pa reinados de su padre y de su abuelo
siones oscurecieron. Era caritativo, se habia visto tan humillada. Los gran
hacia grandes y secretas limosnas, y des tenian influencia en la córte, y no
parte de sus mal adquiridos bienes, podian sufrir que un hombre tan humil
imitando el ejemplo del duque de Ler de y oscuro como don Rodrigo, ejercie
ma, y siguiendo el espíritu de su épo ciese todo el poder, si bien én nombre
ca, la consagró á fundaciones religio— del duque de Lerma, como éste lo ejer
sas, y al establecimiento de obras pias cia en nombre de Felipe HI, aunque has
El hizo labrar de planta y dotó el ta sin necesidad de su firma real. El pue
monasterio de Portaceli de Valladolid, blo se quejaba de su administracion,
cuyo patronato se reservó y conservan acusándole de los males que sufria.
aun hoy sus descendientes. A su costa No podia ser mas desastrosa la ad
se levantó la capilla de Santa Teresa ministracion del duque de Lerma.
de Jesus, del Cármen descalzo de Ma Mientras, se gastaba gruesísimas canti
drid, capilla de bella arquitectura, y dades en prodigalidades y fiestas dan
que no se construyó con mayor sun do al rey ¿ y costosísimos fes
tuosidad por oponerse á ello las reglas tines en vagilla de oro, partidas de ca
de la órden del Cármen. El hizo cons za, torneos y funciones religiosas, lle
DON RODRIGO CALDERON. 364

vándole todos los años á pasaruna tem reciendo de edificios y de palacio, hi


porada en Lerma: se quejaba el rey á zo alojar al rey en la casa de Benavente,
las córtes de no poder sustentar su per mientras habilitaba las suyas propias,
sona y dignidad real, por hallarse teniendo que establecerse los tribuna
vendidas la mayor parte de las rentas les en Medina.
de su patrimonio, y empeñadas por No habia fijeza en las resoluciones.
muchos años las que habian quedado. En 1600 fué la traslacion de la córte á
Llevó el duque de Lerma, al rey á Valladolid: en 1606 se volvió á restituir
Cataluña, á Aragon y á Castilla, soli la capital á Madrid, revocándose una
citando servicios cuantiosos para el rey, medida en que todos habian perdido,
y recibiendo él al mismo tiempo algu escepto el duque de Lerma y sus allega
nos sin saber con que título. dos, que aun en esta mudanza hallaron
Para remediar las públicas necesi medio de satisfacer su sed insaciable de
dades adoptó un sistema, que fué el de oro. Hallándose el rey en Ampudia,
mandar inventariar toda la plata labra villa del duque de Lerma, el corregi
da que hubiese en la nacion, tanto en dor de Madrid y una comision de esta
las iglesias como en poder de parti villa vinieron á suplicar al rey volvie
culares, cualquiera que fuese su estado se á ella, ofreciendo servirle con dos
y calidad, sin reservar ni aun la mas cientos cincuenta mil ducados, pagade
pequeña, cuyos inventarios habian de ros en diez años, y con la sesta parte de
remitirse al presidente del Consejo de los alquileres de las casas por dicho
Castilla, prohibiéndose en el entretan— tiempo: ofrecieron al duque de Lerma
to comprar, vender ni labrar mas plata, regalarle las casas que eran del mar
teniéndola de manifiesto hasta nueva
orden.
¿
de Poza, valuadas en cincuenta mil
ucados, y dar á sus hijos los duques
Grande fué la alarma que produjo de Cea, los alquileres de las casas que
tan estraña medida. En las plazas por se destinasen para su vivienda: hasta
corrillos, en las iglesias por el púlpito, el secretario del duque de Lerma, don
se clamaba contra semejante arbitraria Pedro de Franqueza, recibió tambien
medida, y se vaticinaban grandes males cien mil ducados en dinero. Asi volvió
para la España. La medida tuvo al fin la ¿
á Madrid para no salir de ella
que retirarse con mengua del prestigio desde entonces jamás.
y de la autoridad del gobierno. Continuaba el tráfico inmoral en los
Habiendo fallado este recurso se empleos. Hizo doblar el valor de la mo
apeló á otro no menos estraño y ver neda de vellon, con lo que produjo da
gonzoso. Se llegó á recurrir á los do ños y calamidades inmensas al pais.
nativos voluntarios; y nombráronse Los puestos de importancia que vaca
juntas para que por parroquias, acom ban eran conferidos á los parientes su
pañadas del párroco y de un religioso, yos y á los de don Rodrigo Calderon.
fueran de casa en casa , recogiendo lo Este habia hecho nombrará un tio de su
que cada uno quisiese dar, siendo la muger, don Gabriel de Trejo, sacerdote
menor cantidad que se recibia la de cin de talento, freire de Alcantara, para las
cuenta reales. Asi llegó á pedirse li mas altas dignidades eclesiásticas de su
mosna de puerta en puerta, para socor órden, y le habia conseguido ademas del
rer al soberano mas poderoso de la papa el capelo de cardenal.
tierra, aquel cuyo cetro regia, dos No tenia poca parte en el sistema
mundos, que poseia en sus dominios erróneo de la administracion del duque
¿ ricas y abundantes minas de las In de Lerma, don Rodrigo Calderon, el cual
laS.
aumentaba los empleos y los gastos pa
La córte que se hallaba en Madrid ra sostenerse en el poder, siendo su
establecida desde el tiempo de Feli prodigalidad un insulto á la miseria
pe II, por un capricho, y pareciéndole publica, gravando al pueblo con nuevas
mas provechoso para sus intereses al contribuciones, recargando los gastos
duque de Lerma la hizo trasladar sobre los artículos de primera necesi
en 1600 á Valladolid, causando asi la dad, y levantando empréstitos sobre la
ruina de Madrid, sin mejorar por eso la hipoteca de las futuras remesas de di
suerte de aquella ciudad, en donde ca nero que debian llegar de la América,
46
362 CAUSAS CELEBRES.
-

invencion del crédito nacional que no Don Francisco Calderon escribió á


conocieron los antiguos, medio seguro su hijo la siguiente carta (1).
de ruina para un estado y con el que
ministros aduladores proporcionaban Copia de una carta que escribió el ca
dinero á los reyes para sus caprichos pitan don Francisco Calderon, comen
sin que la nacíon se resintiese por de dador mayor de Aragon á su hijo don
pronto, aunque quedando gravada con Rodrigo Calderon, marqués de Siete
un peso enorme teniendo que aumen Iglesias, conde de la Oliva, capitan
tarse despues las contribuciones para general de la guardia alemana, co
¿ los réditos y el capital, recurso mendador de Ocaña en la Orden de
atal y único medio de eternizar las Santiago.
miserías de la nacion, sin que jamás
los ciudadanos puedan gozar con liber Viendo que con el puesto y mano
tad de sus propiedades amenazadas de que tienes, te has ido ensoberbeciendo
gravámenes y cargas estraordinarias. y desvaneciendo ansi conmigo como con
A esta opresion estaban reducidos otras personas, he procurado por cum
los españoles por el duque de Lerma, y plir con mis , obligaciones reducirte y
añádase á todo esto la en mal hora con reformarte algunas veces con palabras
cebida espulsion de los moriscos que blandas y otras con ásperas, con exhor
robo un millon de brazos á la agricul taciones y reprensiones, ansí de pala
tura, é hizo perecer en la indigencia y bra, como en cartas que te he escrito,
en una forzada emigracion millares de de que hago testigo á Dios que ha sido
familias inocentes. siempre con intencion de que te apro—
Mientras era tan triste la situacion veches dello: y como tú has ido cre
interior del Estado, no era mas próspera ciendo en el puesto que tienes, ansite
la suerte de la guerra en lo exterior. niendo mano en los negocios como en
Se malogró una espedicion intenta adquirir hacienda que son cosas para
da contra Argel, porque las tempesta desvanecer á un hombre por muy cuer
des deshicieron la escuadra. Otra es do que sea, estas han hecho en tí tales
edicion emprendida en Irlanda, en efectos º totalmente te han privado
avor de Jacobo I, hijo de la desventu del uso de razon, que un hombre hon
rada María Estuarda, no fué menos in rado, christiano y temeroso de Dios de
feliz para los españoles, que fueron be tener, y esta soberbia y hinchazon
derrotados, y tuvieron que capitular. ha llegado á punto, que creo (si pudie
Era ya universal el clamor que se ras) hubieras tomado de mí venganza
levantaba contra el ministro duque de en lo público, por no quererte dar mi
Lerma, y principalmente contra su fa hacienda, como me la has pedido, como
vorito. ¿ éste lo miraba con el mas la tomas en lo secreto en todas las oca
insolente desprecio. Entre aquellas vo siones que se te ofrecen, ansi en mis
ces de reprobacion se alzó una que le negocios propios, como en los de las
advirtió de su desatentada marcha; una personas, por quien te he rogado hagas
voz que le pronosticó lo que indudable algo, no me respondiendo á cosa nin
mente debia de suceder; una voz que guna de las que he escrito, escusándote
rasgando el oscuro velo del porvenir leia unas veces con la indisposicion y otras
en él lo que estaba escrito, y le daba el con las ocupaciones, todo á fin de dis
grito de alarma con tiempo para reti gustarme y desabrirme , pareciéndote
rarle del abismo. que como me has engañado algunas ve
Esta era la voz de un padre despre ces desta manera, y yo he disimulado,
ciado y olvidado por su propio hijo, em ha de ser ansi siempre, y pareciéndote
pero que desde el fondo de su retiro le que con este torcedor me has de atraer
recordaba con el derecho y la severi á que te dé mi hacienda, para hallar
dad paternas las amargas y santas ver patronazco della y con esta ocasion te
dades que ningun otro tal vez podria nerme atadas las manos, para que yo
hacer llegar á él en las regiones del no sea señor de nada en vida, ni en
lujo, lisonja y adulacion de que se ha
llaba rodeado el desvanecido don Ro (1) , Manuscritos de la Biblioteca Nacional de
drigo. Madrid. D-156, -
0ON RODRIGO CALDERON. 363
-=

muerte. Si este dissinio llevas, aunque no ha sido movido de pasion, y razon


te parezca que sabes mucho, en esto que tengo, si no de un celo christiano,
eres un idiota y necio, pues para con que en conciencia me obliga á hacerlo.
seguir tus intentos habias de compla Ruégote que reverencies siempre á
cerme, y darme gusto, con que se atrae los superiores, porque lo quiere Dios
mas facilmente un ánimo noble como ansi; estima en lo que es razon á tus
el mio, que no con esos torcedores, iguales, porque hagan lo mismo conti
que no sirven en mí sino de indignar— go; haz bien á tus enemigos, para ga
me mucho mas con cada ocasion. Y pa narlos con esto la voluntad; trata con
réceme, que si ahora habiéndome me amistad á tus naturales porque aprue
nester, para que haga esto, me llevas ben lo que la fortuna te va dando, y
por ese camino, que si lo hiciesse, no defiendan tu persona y honra, teniendo
me mirarias á la cara, habiendo acaba tú siempre delante de los ojos, que no
do lo que quisieres y teniéndome las la tienes mas que lo que estos que te
manos atadas. Hágote saber, Rodrigo, conocen quisieren dártela, y que los
º quiero tener libertad en mi hacien corazones ofendidos suelen quitarla al
a y hacer de ella lo que quisiera, y que la tiene muy arraigada, con razon ó
que en mi vida no te la he de dar para sin ella, no mirando á la ofensa que á
ninguna cosa; quantimas que creo Dios se hace, sino á la satisfaccion de su
sin duda que he de vivir mas que tú, agravio. Y no entiendas que te digo
porque fuy obediente á mis padres, esto sin grandes ocasiones y tan lasti
y tú no lo has sido á mí, ni lo eres, mado de alguna, por donde sé, que de
y digo esto ateniéndome al Evangelio, las puertas adentro de palacio, ni de
ue no puede faltar y esta mi hacen las de esta ciudad adentro no habria
illa aunque es poca, vale mucho por quien te mirase sino como á un enemi
que me la dejaron mis padres, que fue go capital, y el que lo dijo, no lo era
ron buenos, y la ganaron con bendi tuyo, sino amigo de entrambos. Consi
cion y christiandad, y yo la he mejora dera con esto, como quedaria mi cora
do con mi trabajo y sudor, y no ¿ he zon y si me corren obligaciones de ad
adquirido escrupulosamente como otros vertirte dello, pues á donde hay ene
y quiera Dios no te toque á tí algo migos, aunque no sean tantos, por muy
desto que lo sintiera mucho, por lo que apoyada que esté la honra, suelen
me va, y mas porque ni tú lo gozarias, quitarla al que la tiene, como hemos
ni te lograrias con ello, esto tanto por visto en nuestro tiempo en personas
lo que te he dicho, como por la poca muy principales que teniendo á sus
obediencia y respeto que me tienes y padres y passados con hábitos y otros
traslúcese esto y anuncia una gran des actos positivos muy honrados han pues
dicha en tu casa, siendo premissas to dolo en sus hijos, y por estos dete
desta verdad el poco gusto que algunas nídoles los hábitos de que les habian
veces tienes en ella, el haberte faltado hecho merced. Y desta pasion y agra
la hija, como te faltó, el verte en algu vios recibidos son causas. Tenemos en
nos peligros, la vanidad con que te la córte algunos ejemplos, y segun esto
tratas, el poco caso que de todos ha bien advierto yo en lo que te digo, y
ces, de la suerte que tratas á tus cria mira que tú oyes lisonjas, y yo verda
dos, y á los que no lo son, tanto que des, y ansite las digo claras, como es
algunas veces he oido, hablando de tí toy obligado, por lo que á tí y á mí nos
á personas graves, aquel versículo de la importa: y considerando lo que he di
Magnificat, que dice: Deposuit potentes cho, de rayz me parece que es bien
de sede. Mira hijo que podria sucederte estarme como me estoy siendo lo que
y que hemos visto otros en mayores tengo tan bueno y tan honrado y te
puestos caer, y quanto uno está mas al niendo con ello tan honradas circuns
toda mayor cayda, y este temor ya que tancias, para no aventurar, á que nin
no lo tienes á Dios, que es á quien se gun enemigo tuyo (que mio bien sé que
debe tener, querria yo que por lo de no hay) quiera tomar venganza de tí en
acá lo hicieses, pues seria causa de irte mí, haciéndonos mal á entrambos. Y no
á la mano en tus pasiones y demasías; haga tanto caso de lo de Esqueva, ni de
y le prometo que quanto te he dicho, su buen sucesso, que eso aunque sea
364 CAUSAS CELEBRES.

tan principal tambien hay dentro della del rey, creyendo que por serle deudor
lo que tú sabes y la salud que allí se de tan elevado cargo le serviria de apo
dá, es de cofradía y de hospital, donde yo y le defenderia contra los ataques
no se cobrará tan entera, como la que de sus enemigos con el poderoso in
tenemos ahora, por mucho hagan flujo que el tribunal de la penitencia
los comisarios que para esto hay, pro debia ejercer en un rey tan escesiva
ceden mas con adulacion, por la nece mente religioso y devoto.
sidad que de tí tienen que no con el El duque de Uceda era un hombre
amor y verdad que es menester. Guár sin talentos, sin vicios, sin virtudes,
dete Dios de enemigos encubiertos en era una nulidad, empero sabia lisonjear,
tribunal, donde el tal arroja el veneno y no es poca ciencia esta en los palacios
sin miedo de que se sepa en la calle, para poder medrar y ganar la estima
por el secreto que allí dentro hay. cion y la confianza del soberano. Muy
Estos barrancos todos se asseguran lejos estaba el duque de Lerma de creer
mudando de condicion, siendo afable, que aquellos elementos, que él miraba
y haciendo bien, y amistad á todos, y como el áncora mas segura para la esta
al que no se pudieren hacer obras, dalle bilidad de su poder, habian de ser sus
buenas palabras acariciándole y ven mas fuertes y tenaces enemigos. El jó
ciendo el mal con el bien como nos ven duque de Uceda en breve llegó á
lo aconseja Dios, al cual siempre que captarse la benevolencia de Felipe III,
queramos seguir nos ayudará y dará la en términos de que dudaban las gentes .
mano, sin faltar jamás de su parte en uien era mas favorito del rey, si el pa
cosa ninguna. El se apiade de nosotros re ó el hijo.
supliendo nuestras faltas, esforzando Si odio escitaba la privanza del du
nuestras flaquezas para que acertemos que de Lerma con el rey, mucho mayor
á servirle, que haciendo esto, en todo lo era el que habia contra la de don Ro
demas caminaremos prósperamente, te drigo Calderon. Tenia éste un enemi
niendo siempre felices sucesos con gra go terrible, implacable, la reina doña
cia y salud que te dé Dios como deseo. Margarita. Jamás hablaba esta augusta
Valladolid y octubre 9 de 1605.—FRAN señora del secretario de Estado sino
CISCO CALDERON. llamándole el bellaco, el ladron. Em
prendió derribarle del poder en que se
Si sordo se manifestaba al clamor hallaba.
úblico don Rodrigo Calderon no menos La reina doña Margarita siguiendo
indiferente se mostraba á las quejas del sus propias inspiraciones, y halagando
pueblo la ambicion insaciable del duque las devotas inclinaciones del rey habia
de Lerma. Despreciaba todas aquellas querido fundar un convento para mon
quejas y las intrigas de sus enemigos jas recoletas agustinas bajo la advoca
como incapaces de hacerle perder el cion de la Encarnacion en la casa que ha
poder inmenso que gozaba con el mo bia junto al palacio y que llamaban del
narca. Pensó solo en afirmar su autori Tesoro, trayendo por fundadora á la ma
dad sobre bases sólidas, y perpetuarla dre sor Mariana de San José. Primero
en su familia. se hizo una pequeña habitacion, y des
Para este fin colocó en la córte á su pues se levantó el convento tal cual hoy
hijo, á quien de marqués de Cea habia se halla. Fué fundado para las hijas de
hecho duque de Uceda, sirviéndose de los criados de Palacio que no tenian do
él para asegurar el favor del rey y po— te, y para que no se tuviese en menos el
nerse á cubierto de los tiros que pudie Monasterio predilecto de la reina, co
ran dirigir sus enemigos contra su in menzó la fundacion entrando algunas
fluencia y autoridad. A un religioso do hijas de Grandes. Fué nombrada priora
minico llamado Fr. Luis Aliaga, hombre la monja sor Mariana de San José: con
de mediano talento, de esterior modes esta pasaba la reina doña Margarita
to bajo el que no conoció se ocultaba el las horas enteras con celo indiscreto y
intrigante que habia de rebelarse una poco prudente. Llevó tambien al rey
vez puesto en el poder, y que habia sido Felipe III, y como era muy devoto se
su confesor mucho tiempo antes, lo hi aficionó á su trato, asistiendo á casi
zo nombrar para dirigir la conciencia todas sus conferencias un fraile descal
DON RODRIGO CALDERON. 365
-
«en º

zo de la órden de San Francisco llama á don Rodrigo Calderon, atreviéndose


do Fr. Juan de Santa María, hombre hasta publicar un libro en que asi lo
sumamente intrigante, que queria me aconsejaba. La priora de la Encarna
terse en todos los negocios del Palacio, cion llegó en su exaltado celo y aficion
de la política, y con grande ambicion de al fraile francisco, hasta tratar de in
ascender al puesto principal de su ór troducirlo en el despacho de los pape
den. Fueron tales las trazas que se dió les, especie de ministerio de aquella
y de tal modo se captó la benevolen época. Fray , Gerónimo Florencio de
cia de la reina y del rey, que éste instó la compañía de Jesus y otros predica
vivísimamente al papa Paulo V, para dores ¿ rey, ayudaban en sus sermo
que mandase á Fr. Francisco de Sosa, nes los proyectos de la entremetida re
general de la órden de San Francisco, ligiosa.
¿ concediese un general para la ór Sor Mariana se habia declarado pues
en de los descalzos. El papa Paulo V fuertemente contra don Rodrigo, y ayu
llamó al general: le hizo ver las apreta dada del fraile franciscano, y con el
das instancias que para ello le venian apoyo que aprovechando las mejores
de España, y como por una gracia espe oportunidades prestaba la reina, ins
cial querian nombrase un general de taron de tal modo, y procuraron per
sayal. suadir al rey con tales razones de con
El general de San Francisco, hom ciencia á que retirase su gracia al favo
bre sagaz é inteligente, sorprendi rito del duque de Lerma, que aquel
do de la peticion, rogó al pontífice le devoto monarca en quien tanta influen
concediera no mas que un dia para res cia tenian las exigencias de las gentes
ponderle. El pontífice de buena volun de iglesia no resolviéndose á conceder
tad le otorgó lo que pedia, y al dia si les cuanto le pedian, quiso, sin embar—
guiente se presentó ante el pontífice el go complacerles en parte.
eneral, y levantando la voz, enseñan Relevó á don Rodrigo Calderon del
o la túnica y el sayal, le dijo: diga Vues despacho de los papeles y del oficio de
tra Santidad al rey católico y á los reli secretario de su cámara, nombrando
giosos descalzos de San Francisco que para el primer cargo en su lugar á don
ya le tienen: yo lo soy. Desde entonces Juan de Ciriza, y para el segundo á don
toda la órden de San Francisco usó el Fernando de Vivanco.
sayal, evitando de este modo la pru Como el rey obraba forzado bajo la
dencia del general, que la órden tuvie— presion moral de los continuos ataques
se tambien tantas cabezas como eran ue le daban la reina, la monja, y el
las diversas ramas de su instituto. El raile, como estaba enteramente por
Papa lo escribió asi al rey y á los mi otra parte dominado por el duque de
nistros de España, y estos tuvieron que Lerma, al mismo tiempo que sepa
conformarse con la decision pontificia. raba de su despacho á don Rodrigo
Fray Juan de Santa María quedó Calderon le nombraba por su emba
confundido viendo que no habia podi jador en Venecia, dándole antes im
do conseguir sus intentos, y que desde portantes comisiones en Flandes y en
entonces todos los religiosos de San Francia.
Francisco vistieron el sayal, empero Disgustada quedó la reina, que de
fray Juan á cada general que entraba cia públicamente que á aquel bellaco
renovaba su peticion, no debia dársele cargo alguno, sino
Felipe III iba con frecuencia á ver á destituírsele y procesársele.
¿? de la Encarnacion, y aunque Caido al parecer don Rodrigo Cal
indolente y descuidado en cuanto per deron de la gracia del rey, se mantuvo
tenecia á la gobernacion del Estado, en la del mas fuerte que nunca duque
consultaba con ella y se complacia en de Lerma; Habia cesado en el cargo
hablarla de los negocios políticos. material de dar cuenta de los papelés
El rey cada vez se aficionó mas á la al rey; pero su influencia fué mayor y
conversacion al trato de los religiosos, mas poderoso su favor.
muy principalmente al de fray Juan de Hembre previsor y de talento, co
Santa María, el cual no descansaba, so noció que le convenia la ausencia por
icitando con sus consejos que separase algun tiempo de la córte, y marchó á
366 CAUSAS CELEBRES.

desempeñar sus misiones diplomáti aquel desgraciado suceso: cargo horri


cas, desplegando en ellas la magnifi ble que no concebimos cómo pudo ha
cencia y lujo propios de su espléndido cerse á un hombre que no tenia con
carácter. tacto alguno con aquella augusta seño
A su paso por Francia fué recibido ra; empero la envidia y la venganza no
don Rodrigo Calderon en Fontaine raciocinan, son ciegas; y asi estendie
bleau con las Inas altas distinciones ron públicamte que don Rodrigo Calde
por la reina y el rey, con cuyos hijos ron habia hecho morir á la reina doña
se estaban tratando las bodas de los Margarita, de sobreparto, ya haciendo
príncipes españoles. El príncipe de As la diesen remedios contrarios á la en
turias, despues Felipe IV, iba á casarse fermedad que padecía, valiéndose de
con la infanta doña Isabel de Francia, la amistad que tenia con los médicos,
el que iba á ser Luis XIII, con la in ya haciendo que gentes ganadas por él
anta de España, doña Ana (1612). En echasen un tósigo en los medicamen
Flandes fué tambien agasajado de la tos á la augusta enferma.
manera mas ostentosa y cordial por los No podríamos dar crédito á seme
archiduques Alberto é Isabel; y des jante cargo, sino lo viésemos consig- .
empeñada su comision en estos paises, nado en el proceso, y no existiese de
sin llegar á ir á Venecia, volvió á Es él una formal acusacion por el fiscal de
paña con mayor favor, con mas alta la causa, y el mismo Felipe III al cabo
autoridad que antes, recibiendo por re de seis años no hubiese llegado á darle
compensa el título de marqués de Siete crédito y encargado muy especialmen
Iglesias en junio de 16l 4. Entonces ce te á un tribunal, formado para perder
ió con facultad real su título de conde mas bien que para juzgar á su favori
de la Oliva, á su hijo primogénito, don to, de su averiguacion. Tan cierto es,
Francisco. que aun las mas absurdas y ridículas
Aumentóse con esto la envidia; calumnias, aquellas que parece que se
creció la murmuracion, y sus émulos, desvanecen por sí solas, cuando se
reducidos por el pronto al silencio, y apoderan de ellas los enemigos y las
ofendidos con el lujo que cada dia des lanzan sobre la frente de los hombres
plegaba en mayor escala, juraron de de Estado, producen aunque lenta y
un modo irrevocable su pérdida. paulatinamente su fatal efecto, y es
Continuaba en tanto deslumbrando travian no solo la conciencia del vulgo
don Rodrigo á la córte con su lujo y sino aun de las personas mas elevadas
fastuoso porte, rodeado de una turba por su posicion y que debieran ser mas
de parásitos aduladores que nunca fal entendidas!!!
tan á los ricos d poderosos, y aspiraba No se desanimaron los enemigos de
á ser nombrado embajador de Roma, don Rodrigo Calderon por verse priva
porque creía convenirle vivir fuera del dos de su mayor apoyo con la muerte
rein0. de la reina. Prosiguieron trabajando de
En aquel mismo año, el dia 3 de palabra y por escrito con el rey contra
octubre, murió en el Escorial de sobre don Rodrigo sin descanso ni tregua al
parto la reina al dar á luz al infante guna, el franciscano fray Juan de San
don Alonso, que fué llamado el Caro, ta María, la madre Mariana, priora del
porque habia costado la vida á su convento de la Encarnacion, la que te
madre. nia un odio ciego á don Rodrigo, y á la
Este suceso que llenó de luto al rei que la reina difunta en varias ocasio
no, causaba un gran cambio en los nes la habia dejado entrever que apli
proyectos de don Rodrigo. caria los bienes que se confiscasen al
Con la muerte de la reina habia marqués de Siete Iglesias para la con
quedado libre de un terrible enemigo. clusion de la obra de su convento.
La vanidad y el orgullo eran el defecto Agregábanse á estos, el padre Floren
dominante de don Rodrigo Calderon: cia, de la compañía de Jesus, y el que
no ocultó su alegría por aquel desgra estaba con mejor proporcion para tra
ciado acontecimiento; y el resenti bajar en la ruina de don Rodrigo, el
miento y el odio de sus enemigos, le padre Aliaga, el cual habia ascendido
atribuyó una parte muy principal en de confesor del duque de Lerma, por
DON RODRIGO CALDERON. 367
Q=

la recomendacion é influjo del mismo ¿ le consolidasen en el poder. Intro


Calderon, á confesor de Felipe III en ujo en la familiaridad del monarca al
reemplazo del cardenal Javierre. El cónde de Lemos, hombre ilustrado, de
padre Aliaga, tan ingrato como el du gran talento, protector de las letras,
ue de Uceda, trataba de apoderarse que habia desempeñado seis años con
e la voluntad del rey, y no solo se crédito el vireinato de Nápoles, empe
volvió contra el marqués de Siete Igle ro de carácter vano, orgulloso y muy
sias, sino que, viendo la rivalidad que intrigante, creyendo , que era el ele
se habia establecido entre el padre y mento único capaz de derribar á su
el hijo, se olvidó del duque de Lerma hijo de la ¿ del rey. Era primo y
á quien todo lo debia, creyó cuñado del duque de Uceda, y el viejo
que le era mas ventajoso declararse duque de Lerma trató de derribar á su
por el hijo, cuyo poder era cada dia hijo medio de su yerno. La envi
mas consistente. dia, los celos, debian encender en es
Atento solo á mantenerse en el tos dos competidores una lucha fatal,
elevado , puesto de confesor del rey, y de esta lucha habia de resultar ne
olvidando de pronto los beneficios del cesariamente el conservar en sus ma
¿? lo abandonó y se declaró por el nos toda la autoridad, buscando el hijo
ijo, persuadido que debia prometerse y el yerno su favor para derribarse
mútuamente.
mayor favor de aquel que elevaba con
su influencia á la mayor altura, que no Tan bien pensado plan no tuvo
del que le habia sacado á él de la os éxito. Era Felipe Ill de un genio pací
curidad de , su celda para dirigir la fico, y se inclinaba mas al duque de
conciencia de un rey. Uceda por ser mas moderado y com
-

Al partido del duque de Uceda y placiente que el imperioso duque de


del confesor se agregó el conde de Oli Lemos. Ademas, trabajaba en favor
vares, don Gaspar de Guzman, que ha del de Uceda con notable ahinco y una
bia entrado de gentil-hombre en el constancia indecible el confesor Aliaga,
cuarto del príncipe don Felipe. Habia y los nobles, por su genio, chocaban
sido nombrado por el duque de Lerma: menos con su vanidad que con la del
el mismo don Rodrigo que á nadie vi conde.
sitaba, fué á llevarle á su casa muy Entonces presentó el palacio del
gozoso la noticia: aquel hombre se monarca de España el escandaloso es
apoderó del ánimo del príncipe, y de pectáculo de una guerra de favoritismo
bia serles fatal en el futuro reinado, entre un padre y un hijo.
como el valido mas poderoso é influ El marqués de Siete Iglesias, don
yente bajo el nombre de conde-duque Rodrigo Calderon, continuaba en tanto
de Olivares. ejerciendo su omnímodo influjo so
Ambicioso, lleno de presuncion, el bre el duque de Lerma. Decidiéronse
jóven Guzman habia pedido á poco sus enemigos á buscar un medio de
tiempo cubrirse grande de España. Su perderle. No bastaba atribuirle por va
pretension habia sido desechada por el os rumores complicidad en la muerte
duque de Lerma y don Rodrigo Cal ¿ la reina; achacáronle cuantas muer
deron; de aqui el odio, profundo, in tes v asesinatos se cometian en Ma
menso, que atesoró su alma y que de ¿da? su época, asesinatos que
bia producir la caida del ministro, y segun la historia eran tan comunes en
mas tarde la muerte en un cadalso del unos tiempos en que tan atrasada es
favorito de aquel ministro! taba la civilizacion.
Viéndose el duque de Lerma aban En los lances de amor, lo primero
donado por una traicion tan vil de su de que se servia el galan era de su es
hijo y del hombre á quien habia ele pada. Por una simple mirada se verifi
vado hasta director espiritual del rey, caba un desafío, y nadie iba seguro
viendo que se volvian contra él sus por la calle á las diez de la noche sin
propias hechuras, y comenzando á ad Ser” ¿ á un duelo ó espuesto á
vertir tibieza en el rey, quiso oponer á recibir una estocada por un caballer o
aquellos enemigos, á quienes él mismo enamorado creyendo al otro un encu
habia dado posicion, otros elementos bierto rival ó por una venganza.
368 CAUSAS CELEBRES.

Don Rodrigo previó que llegaria á Quiso, pues, hacerle desaparecer á to


sonar para él el dia de la desgracia, y da costa y para ello se dió la mayor
que entonces no podria vencer como prisa. Comisionó á don Alonso de Car
vajal para que, yendo á Valladolid,
hasta entonces el odio perseverante de
sus enemigos. Obtuvo por medio del persuadiese á Juara primero con se
cardenal Trejo y con consejo de éste ductoras promesas, y últimamente, si
ue el duque de Lerma hiciese espe era necesario, con la fuerza, á que sa
¿ al rey dos reales cédulas en los liese del reino, dándole para que ha
años 1611 y 1616 por las que mandaba bitase en Francia una crecida cantidad
que no se pudiese proceder contra él de dinero.
por ninguna causa ni delito, ni espre En efecto, auxiliado don Alonso de
siones que aun contra el mismo rey otros varios, logró dirigirle á la ra
¿ de Francia; pero al llegar á Pancor
pudiese haber proferido, dándole por
fiel y buen servidor. o se encontraron con un agente de la
¿ esto se creyó escudado contra Inquisicion, don Andrés de Alava, que
las futuras persecuciones, como si bas iba en busca de Juara, y con grande
tase nada óvaliesen algo las mas sa trabajo lograron ocultarle. Juara se vol
gradas promesas de los reyes cuando vió á Valladolid. Al saberlo don Rodri
se muda el viento del favor. go se alarmó mucho; volvió á mandar
Pusieron para perderle en juego nuevamente,á don Alonso para que lo
sus enemigos un recurso propio de la despachase de modo que no volviera á
ignorancia del siglo, el cual cundió parecer, y para esto tuvo que valerse
de boca en boca y consiguió alucinar de mil trazas y obligar á los hijos de
al vulgo. Juara á que descubriesen el sitio don
La imprudencia de don Rodrigo de se habia retirado su padre, que era
habia dado tal vez márgen y orígen á el monasterio de Valdescopezo. Enton
este rumor que debia ser uno de los ces se dispuso su salida para Portugal,
rincipales elementos de su pérdida. ó por mejor decir el modo de darle
¿ á don Rodrigo Calderon por muerte, porque en Hornachuelos le
hechicero ó cuando menos por tener asesinaron y arrojaron el cadáverá un
trato íntimo con hombres consagrados pozo.
á esta infame profesion. La noticia de esta muerte se divul
El vulgo no se esplicaba el constan gó rápidamente por la córte y ofreció
te favor que gozaba Calderon y la rá una magnífica ocasion á los enemigos de
pida fortuna que habia hecho, sino don Rodrigo para perderle. La muerte
propalando que habia usado de hechi de Juara, hombre plebeyo y comun, no
zos para ganarse las voluntades del era uno de los acontecimientos que pu
rey y del duque de Lerma. Cediendo á dieran llamar la atencion en aquella
la supersticion de su tiempo, don Ro época; pero fué un magnífico pretes
drigo habia tenido la debilidad de bus to para que se declamase por los ene
car en Valladolid á un hombre llamado migos del ¿ contra el crímen y
Francisco Juara, tenido y reputado se protestase altamente que era necesa
por hechicero, para que le proporcio rio entregar el reo á la justicia; y para
nase algunos medios de conservarse esto hicieron todo lo posible para que
en el poder. Su trato con este hombre, el piadoso y místico Felipe IIl diese ór
á quien perseguia la Inquisicion, habia den de que se procediese á la averi
¿ bastante público. Mientras habia guacion del asesinato. Con este motivo
ermanecido en el poder, mientras redoblaron sus esfuerzos el padre Fray
¿ tenido fuerzas para acallar las Juan de Santa María, la priora de la En
voces de sus enemigos, la Inquisicion carnacion sor Mariana de San José, el
no se habia metido con aquel hombre; prior del Escorial el padre Peralta, el
empero en esta época trataron de pro padre Florencio, y sobre todo, el con
cesarle. fesor del rey fray Luis de Aliaga, que
Don Rodrigo conoció todo el parti era dueño del oido del monarca.
do que podian sacar sus enemigos si Violento le era al rey el entregará
lograban complicarle en el proceso que merced de sus enemigos al hombre á
á Juara iba á formar la Inquisicion. quien habia colmado de tantos honores,
DON RODRIGO CALDERON. 369

====

al hombre á quien habia fiado tambien cion que el mismo rey de las Españas,
secretos que todavía la historia no ha creyó que le sentaria mejor el capelo de
podido penetrar, de que hablaremos al cardenal que la humilde capucha de
referir uno de los principales cargos de fraile.
la causa que despues se formó á don En el año de 1647 en una de las
Rodrigo. El duque de Lerma queria veces que la córte se dirigia á Lerma
tambien al mismo tiempo sostener á murió en Buitrago doña Catalina de la
su favorito; empero no pudieron resis Cerda, muger del duque de Lerma, que
tir á tantos y tan repetidos ataques de con la pompa propia de touna reina fué
aquella especie de batería religiosa que llevada á su enterramien de San Pa
se habia formado para combatir el áni blo de Valladolid. Viudo el duque soli
mo del rey. citó con la mayor reserva del soberano
Mandó el mismo duque de Lerma pontífice Paulo V. el capelo, valiéndose
se procediese á la averiguacion de la influencia y mediacion del carde
el asesinato de Juara: pero se proce nal de Trejo, tio, de don Rodrigo
dió solo contra los instrumentos, con Calderon. El papa le concedió la púr
tra los agentes subalternos. pura romana con el título de cardenal
En el entretanto, el duque de Ler de San Sixto, y el papa y el colegio de
ma veia, ya en la órden de formarse los cardenales le escribieron felicitán
un proceso en que iba á verse envuelto dose por contar á un hombre tan po.
su íntimo favorito, ya en la frialdad que deroso, á un ministro que por tantos
iba notando en el rey, que su autori años habia dirigido la mas grande mo
dad iba decayendo y preveia el momen narquía del mundo, entre los príncipes
to en que sus enemigos iban á triunfar; de la iglesia romana, al remitirle la
media toda la estension del odio que ha sagrada púrpura el 22 de marzo
bian atesorado sus rivales contra el de 1647.
que llevaba veinte años ejerciendo el Siguió el consejo de don Rodrigo Cal
ministerio, no como ministro, sino co deron, creia que el sayal de San Fran
mo verdadero rey, porque á su firma solo cisco mo seria bastante á hacer incli
se daba crédito cuál si fuera la rúbrica narse á los enemigos en el dia de la
del monarca. Asi es que por consejo desgracia, y que la púrpura romana
del mismo don Rodrigo Calderon trató era conveniente en aquella época de
de precaverse para el dia terrible en preponderancia de la Iglesia para con
que se hundiera su poder, hundimien ciliar el respeto de los reyes y de los
to que parecia inevitable. Creyó que pueblos.
urgia buscar un sólido apoyo para su Esta alta dignidad, este principado
crédito y perpetuidad en el poder, que eclesiástico en que se improvisaba el
lentamente se le escapaba de las manos. vacilante ministro, lejos de darle un ca
El duque de Lerma, codicioso, que rácter sagrado á los ojos del devoto
habia allegado tan grandes riquezas, monarca le inspiró menos confianza que
habia sido, sin embargo, espléndi antes. En el pueblo escitó indiferencia,
do y generoso con el clero. Habia fun y redobló el odio de sus enemigos que
dado muchos conventos, habia dotado arrojando la máscara del respeto con
muchos monasterios, habia levantado que aun, lo miraba, comenzó á proferir
hospitales, y afecto al trato de los reli contra don Rodrigo y contra el duque
iosos y eclesiásticos, mas de una vez de Lerma las espresiones mas atroces,
abia mostrado en medio de las gran fijando pasquines en las puertas de su
dezas y la pompa que le rodeaba, sus mismo palacio, uno de los cuales decia
deseos de ir á terminar su vida en un asi á la letra.
cláustro bajo el sayal de San Francisco,
siguiendo el noble ejemplo de su abue El ladron mas afamado
lo el duque de Gandia, San Francisco
de Borja, que habia trocado todas las Por no morir degollado
grandes dignidades del Estado por la Se vistió de colorado.
modesta túnica de los hijos de Loyola.
Sin embargo, aquel hombre habituado Asi se espresaba el pueblo aun antes
á vivir en un palacio con mas ostenta de su caida, desvaneciéndose las espe
47
370 CAUSAS CELEBRES.

ranzas que el duque-cardenal tenia de tenerle. Vanos eran sus esfuerzos: el


que con aquella dignidad religiosa con conde de Olivares se iba apoderando
servaria siempre su ascendiente en el del ánimo del jóven príncipe de Astu
ánimo religioso del rey, y que el dia de rias, era el dueño de su cuarto y cáma
su caida le libraria de los insultos de ra, y logró que fuese separado de él don
sus enemigos. - Fernando de Borja, enviándosele de vi
El mismo medio que habia buscado rey á Aragon. El conde de Lemos, irri
como un apoyo para su poder contribu tado con aquella desgracia, se presentó
yó á acelerar su ruina. Felipe III, no al rey; le habló con energía; y hasta
trató ya desde entonces á su favori tuvo la audacia de preguntarle las ra
to, al amigo de toda su vida, con el zones que habia tenido para desterrar
mismo tono de familiaridad que antes: le, ¿ que si su primo salia
la etiqueta y la ceremonia con que re de palacio tambien él le acompañaria:
cibia, por respeto á la púrpura, á su le recordó los servicios hechos al trono:
valido, hizo resfriar su trato, y bien ofreció su cabeza en espiacion, si en
pronto de la frialdad paso á la indife algo le habia desagradado, y le mani
rencia. festó las intrigas de que iba siendo
Antes de ser cardenal el duque de centro el cuarto del príncipe de As
Lerma se alegraba mucho Felipe III de turias.
que todos le respetasen, y le mirasen El rey le contestó seca y decidida
cual su propia persona, porque aque mente que podia retirarse cuando qui
llos homenages eran tributados al mi Sl69S0.
nistro á quien habia revestido de su El conde de Lemos besó entonces
omnímoda y absoluta autoridad, los la mano del rey, que se hallaba en el
miraba como propios suyos, como di Escorial, y se retiró de la córte con no
rigidos á su misma persona; empe ble independencia; no sin haber antes
ro luego cuando vió que el esplendor tentado evitar la salida de su primo,
de la púrpura la debia á otro bien don Fernando de Borja, presidente del
hechor, cuando él mismo tenia que Consejo de Italia, haciendo que este
tratarle con cierto respeto como á un supremo tribunal representase al rey
ríncipe de la Iglesia, empezó á ser la necesidad que habia de que su pre
e incómoda su presencia, á verse fa sidente permaneciese á su cabeza, por
tigado con la ceremonia que á pesar no haber nadie que tuviese tantos co
suyo tenia que ¿e. y de aqui la nocimientos de los negocios de aquel
frialdad, la indiferencia, y á muy po vasto pais.
co despues el fastidio. Inútil fué esta habilísima intriga:
Los cortesanos, augures de los sem el rey contestó que el conde de Bena
blantes del rey, bien pronto advirtie vente, que habia, nombrado por su
ron aquella mudanza; vieron que el presidente, entendia tan bien los me
duque de Uceda ganaba á pasos agi gocios como ¿
gantados terreno en la confianza del Habian faltado de repente al duque
rey, al paso que le iba perdiendo su de Lerma dos de sus principales ami
padre. gos, dos parientes que habia colocado
Comenzaba á sufrir desaires el vieal lado del príncipe para contrabalan
jo cardenal, duque de Lerma. En el cear las maquinaciones de su hijo el
cuarto mismo del príncipe de Astu duque de Uceda, y del confesor, el pa
rias, que le miraba como un hijo, y dre Luis de Aliaga. Parecia que era el
á quien habia visto nacer, siendo ya momento en que el ministro-cardenal
favorito del rey su padre, y de quien debia de abandonar la córte; pero aquel
ademas era ayo y mayordomo, em anciano cortesano, que habia envejeci
pezó tambien á notar desvio, no obs do en el palacio, por mas desaires que
tante de que á su lado tenia á sus le hacian no queria dejar su minis
dos sobrinos, el conde de Lemos, y terio.
don Fernando de Borja, como gentiles Siguió al Escorial al rey con la ma
hombres, los que le debian esta digni yor tenacidad, pugnando, pero en va
dad, y que reconocidos á sus beneficios no, por recobrar su antigua privanza
empleaban toda su influencia para sos que se le escapaba por momentos de
DON RODRIGO CALDERON. 374
=== ===

las manos; hasta que Felipe, cansado veces le habia pedido con tantas veras
de ver que aquel hombre no se desa y encarecimiento para su descanso y
sia espontáneamente del poder, se de sosiego, se lo concedia ahora, por lo r
cidió á separarlo de sí, y con tan cruel que podria retirarse á Lerma, ó á Va
inoportunidad, que escogió el dia del lladolid, cuando quisiese.
duque, el de San Francisco, 4 de octu Recibió con serenidad el duque-car
bre de 1518. denal esta fatal sentencia. Subió luego á
Hizo el rey llamar, á su cuarto á besar la mano á Felipe III, dándole gra
fray Juan de e¿ prior del Esco cias por la licencia que le habia dado
rial, uno de los de la liga contra el para emplear los últimos dias de su vi
cardenal-ministro, y contra don Ro da en el sosiego.
drigo Calderon, y e que despues fué El duque hizo llamar despues á sus
arzobispo de Zaragoza. El religioso fué criados; les dijo que previniesen todo
al punto á ver al rey, el que despues de lo necesario para caminar á Lerma; y
haberle preguntado algunas cosas to en breve instante quedaron hechos to
cante al gobierno del monasterio, y de dos los preparativos del viage.
haberle hablado de lo mucho que que En seguida volvió á ver al rey, al
ria al duque de Lerma, en quien mas que encontró solo en su aposento, é
que un antiguo criado miraba un con hincándose de rodillas le besó la mano
sejero y un verdadero amigo que lo ha y le dijo.
bia tenido en sus brazos al nacer, que —Señor, carecer de la vista de V. M.
dó suspendido un largo rato como no me lleva con el mayor sentimiento, y
atreviéndose á continuar, y con voz es justo considerar como al menos con
muy apagada, y hablando muy pausa aquella desconfianza que en las muchas
damente cual si le costase trabajo el y muy notables honras y favores que
traducir en palabras su pensamiento, siempre me ha hecho me puede descae
le dijo: cer, porque ¿ me arrastrasen y
—Ireis á ver al duque de Lerma, y llevasen los pecados al último término
le direis lo mucho que siempre he es de la tierra, su resplandor es tal que
timado su casa y su persona, y la gran allí me alcanzarán sus rayos. Alli, se
confianza que he hecho de e asegu ñor, me tendria por favorecido, como
rándole que nunca me olvidaré de su ahora nunca he creido menos, porque
fidelidad y servicio: que lo que tantas mi obediencia, amor, fidelidad y servi
veces y con encarecimiento me ha pe cio me alimentarán con esta confianza,
dido para su descanso, quietud y sosie de suerte que de tan justificado mo
go, vengo ahora en dárselo, y que asi narca no era justo esperar otra cosa.
podrá retirarse óá Valladolid, ó á Ler— Todos mis antecesores cumplieron con
ma, ó á donde quisiere. este aliento, emplearon toda su vida,
Asombrado quedó fray Juan de Pe honor, y hacienda sin un punto de
ralta al ver que asi se desvanecia una intermision en servir á los ínclitos
privanza de veinte años, y contra la progenitores de V. M., y asi ocupa
que hasta entonces tanto habian tra ron en su palacio tan superiores lu
bajado él y otros, en vano, y pálido y I"eS.
poniendo sus rodillas en el suelo, no De trece años entré en este palacio,
¿ mas sino decirle al rey que iba á y hoy se cumplen cincuenta y ocho que
acer lo que le mandaba. tengo empleados en este diseño, poco
Fué el prior al aposento del duque, para mi deseo, mucho para lo que per
que lo tenia en el mismo monasterio, y mite el desengaño á que debemos ofre
lo encontró en él; y despues de haber cer, ya e no toda, siquiera alguna
hablado con gran turbacion de algunas parte de la vida. Esto, señor, pide aho
cosas, le dijo que el rey le habia man ra descanso, reposo, y quietud.
dado llamar para que le dijese lo mu Mucho me dejo, mas debo esperar
cho que siempre habia estimado su ca que hable por mí la memoria de anti
sa y su persona, la gran confianza que guos beneficios, que á los mios dispen
habia hecho de ella, asegurándole que sáran tambien sus predecesores, que
nunca se olvidaria de su mucha fideli siempre ejecutaron su voluntad, servi
dad y servicio, y que lo que tantas cio mas preciso que otro alguno en la
8º 2 CAUSAS CELEBRES.
===

estimacion de los reyes, y por mas que de octubre irian con la córte á Lerma.
presuman calumniar mis acciones (y A todas estas cosas callaba el du
esto es lo mas ordinario y natural del que, respondiendo con alegre y risueño
oficio), no podrán menos de convenir semblante.
que con todos mis sentidos y potencias Pasó despues al cuarto de la con
me dediqué al bien particular y propio desa de Lemos, su hermana; estuvo
de V. M. Muchos buenos efectos se con con ella hablando largo rato, recibien
siguieron. Los notables no los pudo do sus consejos. Vinieron sus hijos
¿ la tolerancia de las fuerzas y sus nietos: á todos los abrazó, y
umanas; antes bien sucedieron cosas la escalera secreta del bosqueci
que me atreví muchas veces á forzar lo de San Lorenzo se salió tomando
la misma naturaleza, y la traje á su una litera. Dirigió por última vez sus
servicio y su obediencia, con que obli ojos preñados de lágrimas al cuarto
gué y espanté las acciones del mundo. donde estaba Felipe y sus hijos, les
Contento me lleva, señor, ver que an echó la bendicion, y tomó el camino
tes que menguadas, quedan con mayor de Guadarrama, donde durmió aque
autoridad y acrecentamiento sus fuer lla noche, para dirigirse desde alli á
zas y las de la religion, á las que siem Lerma.
pre enderecé todos mis cuidados, y pu El rey le envió de regalo un ciervo,
se con particular atencion el hombro. que él mismo habia muerto aquel dia,
Estos trabajos honrarán mi sepulcro, con una carta cuyo contenido jamás se
perpetuarán mis cenizas, y serán los ha podido penetrar.
testimonios mas gloriosos de mi repu Ningun ministro cayó de una altura
tacion, y el escudo contra la voracidad tan elevada con mas suavidad, y con
de mis émulos. Ellos podrán inventar, menos violencia que el duque de Ler
empero no escalarán ni se atreverán á ma, teniendo tantos y tan terribles
dar asalto al muro inespugnable de mi enemigos, y estos dentro de su propia
fidelidad. Fr. Juan de Peralta me ha di familia, de aquellos que la naturaleza
chs a merced que V. M., entre las mu parecia haber destinado para que fue
chas y muy grandes que siempre he sen su apoyo y su sosten.
recibido de su mano, me hace en esta La púrpura romana tan venerada
ocasion, dándome licencia para reti entonces, le dejaba ademas en una al
rarme. tísima posicion. Si bien no le habia
El rey le respondió que sentia mu servido como creia para perpetuarle en
cho su ausencia, y que fuese descuida el poder, pues solo fué ministro con
do y con seguridad de que en todo lo ella seis meses, le sirvió mas adelante
que tocaba á la satisfaccion de su per y en el reinado de Felipe IV, de po
sona y servicios, quedaba en el lugar deroso muro donde vinieron á estre
que siempre habia tenido, y con la mis llarse los implacables pero impotentes
ma estimacion que antes, y que asi la odios de sus enemigos.
tendrian los de su casa. El duque de Uceda reemplazó en el
Al oir esta respuesta, volvió á do ministerio á su padre y la nacion no
blar otra vez la rodilla el duque, y á ganó nada en el cambio. Su primer acto
besar la mano del rey. Este con otro fué mandar instruir una sumaria con
semblante le echó los brazos al cuello, tra su padre. Este hecho debió dar á
despidiéndose de él con la ternura de conocer al rey el carácter de su nuevo
un hijo. ministro; pero amante de la tranquili
Despues pasando el duque al cuarto dad se contentó con mandar suspender
de la princesa despidióse de ella, de los procedimientos contra su antiguo
los infantes y del príncipe; y ni aun favorito.
á estos les habló de su caida, en tér Los partidarios del duque de Lerma
minos que el príncipe de Asturias le habian sido separados ya antes del
dijo: - cuarto del príncipe y políticamente re
—Ayo, vuelve presto, no te es— tirados unos, y los que quedaban, aun
tés mucho por allá, luego iremos los que no eran partidarios del conde de
dos otra vez, creyendo, que como Olivares y del duque de Uceda, fueron
otros años por estar á los principios destituidos y desterrados ahora.
DON RODRIGO CALDERON. 373
- ==:

En lugar del duque de Lerma, con oriental, y entró al frente de su com


siguió el conde de Olivares fuese mom pañía en la Plaza Mayor de Madrid,
brado ayo del príncipe de Asturias y donde se corrian toros y cañas, y en
que viniese á España su tio don Bal que se hallaban en los balcones los re
tasar de Zúñiga, embajador que era en yes, la grandeza y un pueblo inmenso.
Alemania y nombrado recientemente Todos fijaban sus miradas en él. Esci
para el mismo cargo en la córte de tada la envidia que su padre le habia
Roma. predicho, sus rivales y enemigos, lo
El duque de Lerma no era entera miraban con enojo. Alli, entre aquellos
mente aborrecido del pueblo, sino de grandes, casi al lado del rey, se halla
los grandes, y tenia mucho partido en ba don Gaspar de Guzman, el conde de
el clero. Olivares, el hombre que minaba en se
La reaccion se manifestó mas vio creto la privanza con el rey del duque
lenta contra don Rodrigo Calderon, de Lerma, el hombre que le miraba
marqués de Siete Iglesias, el cual con con el mayor odio, el que debia dar fin
servaba todavía muchos de sus princi - á su vida.
pales destinos. Ya hemos dicho que Por relacion del mismo don Rodri
previendo su desgracia, habia tratado go Calderon, hecha en los últimos mo
de precaverse contra ella. Cuando to mentos de su vida á su confesor, se
davía se hallaba en la privanza y ocu sabe que fué tal el desvanecimiento
paba el ministerio el duque de Lerma, que sintió al verse en medio de la pla
habia conseguido por medio de éste, za con el baston de capitan general de
no sin bastante trabajo, que el rey es la guardia alemana, en presencia de
pidiese dos cédulas, en las cuales el tantos enemigos, reducidos todos por
monarca le daba por bueno y fiel mi su poder al silencio, que no pudo me
nistro y le perdonaba cualesquiera de nos de decir entre sí: «válgame Dios,
litos que hubiera podido cometer ó es— que me vea yo en tanta fortunal
presiones que hubiera dicho contra su Qué será de mí si los que ahora me
real persona. Las negociaciones que ven triunfando llegasen á verme al
mediaron para obtener y conseguir es gun dia en esta plaza quitarme la vi
tas cédulas, que lejos de servirle de da afrentosamente, cosa que tanto
escudo se convirtieron en uno de los temo!!!»
cargos mas terribles contra él, las exa Aquella idea, aquel fatídico pensa
minaremos mas tarde cuando hablemos miento, no se separó de él en todo el
de la acusacion que contra él se en dia. Una grave melancolía se apoderó
tabló. de su ánimo: en vano buscó en el si
Dos meses antes de la caida del lencio de la noche y en el descanso de
duque de Lerma, un presentimiento la cama un alivio á su pesar; no pudo
terrible habia agitado el corazon de don reconciliar el sueño. Tampoco el nuevo
Rodrigo Calderon y le habia hecho pen dia fué bastante para alejar de él aquel
Sar en abandonar la alta posicion que ensamiento tenaz, fijo, contínuo, que
ocupaba y retirarse á vivir lejos de la e perseguia.
córte. Dos meses despues se verificó la
Era el mes de agosto de 1618; cele caida del duque de Lerma y aquel pen
brábanse funciones reales en la Plaza samiento adquirió fuerza, aquella idea
Mayor de Madrid por haberse verifica se hizo mas punzante; asi es que se
do el matrimonio del príncipe de Astu decidió á huir de la córte, creyendo
rias con la infanta doña Isabel de Fran que apartándose de la vista de sus
cia, y el de Luis XIII con la infanta de enemigos, abandonándoles todos sus
España doña Ana, matrimonios en cu destinos, que eran el objeto de su en
yos conciertos habia intervenido don vidia, reduciéndose á la oscuridad,
Rodrigo Calderon. Hallábase éste en el conseguiria desvanecer la tremenda
apogeo de toda su grandeza é iba al tempestad que se cernia ya sobre su
frente de su compañía como capitan de cabeza.
la guardia alemana, en un brioso ala El dia 8 de enero de 1619, obtu
zan ricamente enjaezado. Ostentaba su vo una audiencia particular del rey.
gallarda persona rodeado de un lujo En esta audiencia le presentó su re
37 4 CAUSAS CELEBRES
======

nuncia concebida en estos términos: á buscar un asilo en una nacion es


—Señor: si el mucho tiempo que he trangera.
servido á V. M. con toda lealtad me Don Rodrigo, aunque hombre muy
rece algun aprecio, y consideracion, religioso que habia empleado gran par
justo será conseguir por precio de te de su fortuna en favor de la Igle
mis desvelos el retiro á la vida priva sia, dotando capillas, favoreciendo
da que tanto anhelo junto á mi queri hospitales y creando monasterios como
do padre. Una vez apartado de los ne el de Portaceli de Valladolid, del que
ocios del Estado, desistiran mis ému era patrono, era un hombre sumamen
os de ponerme contínuas asechanzas te supersticioso. Habia en este monas
que en último resultado traerian la rui terio una religiosa que pasaba por san
ma de mi persona. Por estas razones ta, conocida por su vida ejemplar y sus
me he decidido á renunciar desde hoy virtudes. A ella se dirigió don Rodrigo
á todos mis empleos: y espero confiado consultándola que debia hacer para li
que V. M. escuchará benigno el senti brar su vida y opinion de las iras de un
miento de un vasallo fiel, acogiendo su rey irritado, puesto tenia en su mano
renuncia bajo el manto de la clemen el salvarse por la fuga. La monja, que
cia real. Tranquilo en mi hogar do— algunos creen que fuese doña Mariana
méstico, bendeciré desde alli una y de Escobar, que murió en grande opi
mil veces la generosidad de V. M., nion de santidad, le contestó que
y pediré sin cesar , al Dios supre mejor se salvaria esperando el fin. Con
mo por la mayor gloria y prosperidad este ambiguo oráculo quedó sosegado
de V. M. -

el ánimo de don Rodrigo Calderon, no


Al dia siguiente de haber tenido comprendiendo sino mas tarde, que el
esta conferencia con el rey, en la que camino que la monja le indicaba era
le trató con la mayor afabilidad y hasta que asi salvaria no el cuerpo sino el
le dió muestras de un cariño que en alma.
ciertos momentos suele ser muy peli El rey, que tanto habia favorecido
groso en los reyes, se dieron órdenes á don Rodrigo, y que, como los reyes
exhonerando á don Rodrigo de todos todos, abandonó á su privado al furor
sus cargos públicos. de sus enemigos, encomendó el exámen
Este se marchó á Valladolid con y fallo de la justicia de las acusaciones
su muger y dos hijos. Tenia como que se hacian á don Rodrigo á un tri
hombre que habia ejercido tan gran bunal especial reservado, compuesto de
de influencia, entre muchos enemigos, tres consejeros de Castilla, un fiscal y
algunos amigos. Los enemigos, espe un SeCretarl O.
cialmente el conde de Olivares, redo Escogió Felipe tres consejeros de
blaron todos sus esfuerzos, y no bas Castilla de los mas respetados por
tándoles verle retirado en Valladolid, sus luces y prudencia, de los
trataron á toda costa de deshacerse de cuales el uno de ellos, don Francisco
su persona. de Contreras, se hallaba retirado hacia
Mientras trabajaban sus enemi algunos años del consejo, por disgusto
gos propalando las acusaciones mas que habia tenido en ver que á otros
absurdas y propias de la ignorancia mas modernos se les habia antepuesto
del siglo, mientras las hacian correr para los principales cargos de la cáma
de boca en boca alucinando al vulgo, ra; los otros dos eran don Luis de Sal
sus amigos le aconsejaban que se pu cedo y don Diego del Corral, y por se
siese en salvo, y le escribian para cretario de aquella junta se nombró á
esto incesantemente á Valladolid, por don Pedro de Contreras, y por fiscal al
que se trataba nada menos que de for licenciado García Perez de Araciel, fis
marle una causa criminal y hacerle cal del mismo Consejo de Castilla;
víctima de ella. Aunque don Rodri siendo el escribano Lázaro de los Rios,
go tenia una alma fria y serena, tan que lo era de la cámara.
to le ponderaron el peligro, que co El rey sin haber dado parte de esto,
menzó por ocultar entre sus amigos y ni aun las personas mas allegadas á él
confidentes gran parte de las joyas, y confidentes, mandó llamará palacio á
dinero y papeles que tenia. Dudó si ir estos ministros, y llevándolos á la par
DON RODRIGO CALDERON. 3,3
-->

te mas retirada de su cuarto les dijo: Felipe III, y éste le dió un papel cer
—Os mando llamar, y he hecho elec rado, el cual queria que viesen y exa
cion de vosotros para fiar de vuestra minasen aparte.
entereza y letras, y buena intencion Saliéronse de la pieza, y se fueron
con que siempre me habeis servido y á la casa de don Francisco Contreras
aconsejado, en el negocio de mas im para tratar de dar principio á la grave
portancia de cuantos, ha tengo la coro comision que se les habia confiado. Hi
na de España, se me ha ofrecido. La cieron llamar á Pedro de Contreras, y
satisfaccion que tengo de vuestras par delante de él se abrió el papel que ha
tes y personas, os obliga á desempeñar bia dado el rey á don Francisco, el
la confianza que hago de vosotros, la cual decia que averiguasen con toda
cual no pienso fiar de otros. He llegado puntualidad y cuidado, sin perdonará
á saber ¿? don Rodrigo Calderon, cosa humana, si el marqués de Siete
marqués de Siete Iglesias, á quien ¿ Iglesias tenia alguna inteligencia en la
he hecho tantas mercedes, ha hecho muerte de la reina.
matar asesinamente á un hombre lla Asombrados quedaron los jueces
mado Francisco Juara; averiguad esto, con aquella especie de acusacion que
y lo ¿ os dice este papel. Para que el mismo rey hacia, al encargarles
mas libre y desembarazadamente po averiguar una cosa de que solo doce
dais , usar de la órden que os doy, y años antes se habia ¿ el vulgo,
hagais justicia, remito todo lo que hi y de la que no parecia haber pruebas
ciéredes y ejecutarades aqui solo á mí, ni datos fundados.
á quien dareis cuenta de ello; encar Disertaron largamente cómo habian
gandoos ante todas cosas el secreto y de empezar á proceder en su comision,
la justicia, que es la principal causa y creyeron que la primer diligencia
para que Dios me puso en este lugar, debia ser la prision de don Rodrigo, y
y en virtud de la cual reinan los reyes ¿ en un mismo dia y hora se le con
y es obedecida y respetada la omnipo scasen todos sus bienes en Madrid y
tencia divina. Valladolid.
Apenas habia acabado el rey de Con arreglo á lo que el rey les te
pronunciar estas graves é importan nia prevenido consultaron directamen
tes palabras, los consejeros se arrodi te con él esta medida; y el rey mandó
llaron y le besaron la mano; y don que se ejecutase.
Francisco de Contreras, que hacia en Recibida la aprobacion del rey á la
aquella junta como de presidente por propuesta de la prision de don Rodri
ser el mas antiguo, se levantó y en o, despachó la junta una órden firma
nombre de todos dijo: a por el ¿ al licenciado don Fernan
—Señor, aunque yo mi vejez y do Ramirez Fariñas, del Consejo real,
poca suficiencia, años ha que he de que á la sazon se hallaba visitando la
jado de acudir al consejo por no ha chancillería de Valladolid.
llarme con las fuerzas y vigor necesa Don Fernando de Fariñas, en cuan
rio que conviene para servir á V. M.; to recibió aquella real órden en la no
lo haré ahora, señor, que soy llamado che del 20 de febrero de 1619, con al
para cosas que convienen para su auto gunas gentes de confianza marchó muy
ridad y justificacion, para eso quere secretamente á la casa del marqués, y
mos, señor, las vidas, los vasallos, llamando á ella le avisó que estaba
las fuerzas, y el aliento para emplear alli, como si quisiese hacerle una visi
las en el servicio de V. M.; d asi eje ta ordinaria.
cutaremos con gran prontitud, solicitud Mandóle entrar, y en la misma ho
y cuidado lo que se nos manda, te ra sin perder un minuto le dijo que
niendo la felicidad que haya en nos traia órden del rey para prenderle.
otros caudal considerable para hacerle Don Rodrigo Calderon no , se alteró,
algun pequeño servicio. porque no le cogia ya de sobresalto la
Habiendo terminado don Francisco disposicion que hacia tiempo que esta
de Contreras este pequeño razonamien ba temiendo, y le respondió que se
to, por el cual admitian los consejeros hallaba dispuesto á obedecer las órde
la comision del rey, besaron la mano á nes del rey, como siempre lo habia he
376 CAUSAS CELEBRES.
==

cho por espacio de veinte años, y que las tiendas, y como don Francisco que
asi dispusiese lo que fuese servido ha ria y era justo se los pagasen á sus
cer de su persona. . . dueños, el marqués hizo traer de su
Don Fernando de Fariñas le puso casa diez y ocho y estos menos compré.
algunos hombres de guardia; no le de Don Francisco no quiso darse por en
jó tomar cosa alguna de su casa; le tregado dél hasta el punto que partió;
pidió las llaves que tenia en la faltri entonces le hice la entrega por auto y
quera, y le registró todo cuanto habia, testimonio como ai embio.
entregándole despues de haber sido Proveí auto para que el marqués
¿ al alcalde de casa y córte don diesse todo el dinero que fuese menes
rancisco de Irazabal. ter para su ida, y estada allá, y guar
Al momento que circuló por Valla das, y toda costa; y agora de presente
dolid la noticia de su prision causó un mil ducados por parecerme que donde
grande asombro. Como una novedad hay dinero es mas fácil sacarlos que
estraordinaria acudió muchísima gen reducir plata, ni alhajas á dineros; y
te á las inmediaciones de la casa, co él dió luego cédula que se hizo en mi
mo si pudiese el vulgo, curioso de ver presencia y del escribano de la visita
lo ¿ pasaba dentro de la casa de don de los mil ducados. Juró dificultad en
Rodrigo Calderon, traspasar con sus haberlos tan presto, y dixo don Fran
ávidas miradas las paredes, dentro de cisco era poco dinero para ir con tanta
las cuales se hallaba preso aquel hom gente y tener allá lo necesario hasta
bre, á quien habian visto en tan alto proveer mas; por lo cual se trató con
poder, y contra el que se habian des Francisco Crema, vecino desta ciudad,
encadenado los odios. que diese luego aqui dos mil ducados
Don Fernando Ramirez Fariñas en dándole el marqués libranza dellos so
tregó la persona de don Rodrigo á don bre los Fúcares, donde tiene cien mil
Francisco Irazabal, que era alcalde de ducados segun él dixo, con esto y con
córte, caballero de la órden de San que el mismo don Francisco salió por
tiago, el cual lo, puso aquella misma fiador á Crema de que la libranza de
noche con guardias de vista en la casa los dos mil ducados se le pagaria,
del Cordon, que era donde habitaba Creuna dió el dinero yendo el mar—
pertenecia al marqués de Avila qués dispuesto á proveer todo lo ne
uente. cesario sin que sea menester tomár
Oigamos al mismo Ramirez Fariñas selo por justicia: pidió, le dejásemos
al dar cuenta á la junta de la impor escribir á la marquesa, y Fúcares pa
tante prision que acababa de verificar. ra que del dinero que tienen suyo die
Este parte, copiado de los manuscritos sen lo que la marquesa librase y pi
existen en la Biblioteca nacional diese para el gasto de su prision; y
e Madrid, da por sí solo mas luz y como esto era conveniente para mu
claridad sobre este asunto, que cuanto chas cosas, hice escribiesse á la mar—
nosotros pudiéramos espresar. Es á la quesa y Fúcares en mi presencia y del
letra como sigue: escribano de la visita, en cuyo poder
queda testimonio de todo; y embio á
Relacion que don Fernando Ramirez V. S. I. lo que escribió á la marquesa,
Fariñas hace de la prision que por él yvea;
Fúcares, abierto para que V. S. I. lo
y si pareciere bien dársele á la
se eacecutó en la persona de don Ro marquesa esa carta y la libranza á los
drigo de Calderon. Fúcares se la mande W. S. I. dar, y si
no conviene no se le dé, que por eso
A LA UNTA. van los originales abiertos en pliego
de W. S. I. para que disponga lo que
Como escribí á W. S. H. con el ordi mas convenga; que como yo no sé lo
nario que llegará primero que esta; don que allá hay ó ha de haber, ando á
Francisco de Irazabal no partió hasta el tiento.
23 deste á la tarde, que es oy sábado; A los 20, á las diez de la noche le
á las tres llevó veinte y cinco arcabu prendí, y á los 22 tuve carta del señor
ses de los oficiales que los tenian en cardenal-duque de 24, en que me manda
DON RODRIGO CALDERON, 377
f= -

le regale, y tenga cuenta de su persona, carta en su fecha y aun oja, y ambos


que aunque yo mandé no se diesen pos inventarios van con el cajon.
tas ni correos á persona alguna, con Díjome que tambien me mentaban á
los rocines ó cavalgaduras de su casa, mí en una de las cartas; porque el ser
llegóel aviso tan presto; yo sin eso te vicio al duque, que yo estaba cariñoso
nia cuidado de servir á Dios en rega con él y le habia enviado un recaudo
larle, tanto mas por lo que alcanza la sobre un negocio del comendador mi
humildad con que estaba con los co señor que está en Malta; y que el du
razones honrados aunque estén mas que no advirtiendo lo que él escribia,
ofendidos, regaléle, consoléle quanto respondió que él habia dejado en buen
pude, entreguéle, como he dicho, ví la estado el hábito de mi hijo, y lo acor
cifra, el paradero de la vanidad y po— daria á S. M., el recado de mi hermano
der del mundo. Cuando entró en la li le fingi, para que un criado mio tuviese
tera se le saltaron las lágrimas por el ocasion de ir, y venir á él, y saber lo
rostro, lastimó á todos, y tanto mas " que él hácia y hacian con él y los oido
cuanto mostraba suma humildad, la res que con él comian, y las juntas que
gente fué tanta que por el contorno de hacia y fué sobre que porque tribunal
mi casa no cabia, me afirman que has— escribia S. M. al gran maestre porque
ta la fuente de Argales estaba todo tan procurasse una carta suya, para que el
oblado de coches y gente, que parecia Maestre diesse una encomienda de
imposible quedar coche, ni persona en gracia á mi hermano, la pretension
la ciudad; muchos alegres del ejemplo era verdadera, pero el embiarle yo á
de justicia, se lastimaron y lloraron de preguntar como . se habia de negociar
la miseria humana, yo desee saliese fingido, porque ha dias embié el me
por la mañana mientras la chancillería morial á, don Bernabé de Vivanco y
y universidad y ocupaciones della ten— que escribí á la madre priora como ha
gan la gente ocupada, porque la gente bia fingido aquel recado por ocasion de
que ha estado al rededor de mi casa saber de su persona y casa, y de las
estos dias mostraba lo que habia de personas de la Audiencia, y supe que
ser, y entiendo no pudo abreviar mas don Andrés de las Infantas fué tambien
don Francisco: mostró deseo de que no su convidado.
se pasase por Medina del Campo, por- Díjome le pesaba mucho hubiese
que no se alegrasen de su espectáculo topado las cartas del marqués de Sa
sus contrarios. Don Francisco le dijo bara; yo no las he leido, tengo por
pasaria por defuera, creo lo hará assi, buen caballero al marqués, allá van.
pero el dijo: que por alli, y por donde Díjome sentia le hubiesen topado
quisiese le pasasse, que poco impor- unos caractéres ó quentos de figura,
taba que él lo sintiese. quadernillos de cosas de astrología;
Díjome que los pecados que no se tambien van allá.
hallaseu en los papeles que he tomado, Deseó no llevaran las de la mar
y embio, que ni los tenia ni se halla- quesa su muger, aunque dice no hay
rian con verdad: que de los que resulta- en ellas cosa mala, yo no las he leido;
sen de la vista de los papeles no negaria allá van con , todo lo demas, como pa
cosa, pero que tenia los perdones, y rece por los inventarios; solo no pusi
gracias de S.M., cerca dellos, que van mos tres cartas de la madre Priora en
con los mismos papeles. respuesta de otras, porque las leimos
Díjome que le pesaba de que le hu y no tienen nada, y á este tono otros
biasen hallado las cartas que escribe papeles impertinentes, que fácilmente
al duque, y las respuestas y cartas del se cayeron por no mezclar cosas su
duque para él, mayormente habiéndo pérfluas. Hízose el inventario en mi
le el duque avisado por una dellas, ó presencia y de don Francisco de Iraza
por dos, que no durmiese con carta su bal, papel por papel ante el escribano
ya, y las quemase ó rompiese todas: yo de la visita; va en el inventario lo que
no pude escusar de hacer fielmente envio allá, y lo que queda acá; porque
mi oficio, tanto mas diciendome él es-, si algo de lo que acá queda pareciere
to, y asi habiéndola puesto en el inven convenir como es el testamento cerra
tario della, por menor poniendo cada do del marqués, una declaracion con
48
378 CAUSAS CELEBRES.
=

cerniente á el, y otros papeles los en dos papeles de cifras para con el du
vie, y entretanto quedo con uno de que, y para cada, uno de los demas
los dos escritorios en que quedan, y la confidentes una cifra, y tambien para
llave dél: que como los escritorios no con su padre: V. S. I, mandará avisar
eran todos de papeles sino de otras si convendrá tomar los papeles á su
muchas cosas, por eso no los envio en padre, que ¿ por no lo decir mi cé
ellos mismos. dula, no se los he tomado.
Díjome don Francisco que el mar— Tambien escribí que he hecho de
qués le habia dicho á él que le lleva tener los pliegos para el marqués en
ban á Montanches; preguntéle á solas el correo, hasta que se me avise si los
al marqués que cómo lo habia sabido; tomaré, y enviaré allá asi cerrados, ó
díxome, que don Francisco le dixo que los dejaré dar á su padre; y tambien
le llevaba á una fortaleza de su órden si tomaré los de su padre, pues en
á Estremadura; que con esto el fué ellos pueden venir cartas para él, y
preguntando si era Uclés, ó Mérida, y en las de su padre cosas de la ma
otras, y metió entre ellas la de Mon teria.
tanches. En la prision del almirante de
Es buen hombre don Francisco y Aragon, se le permitia tener un cria
hará fielmente cualquier cosa; pero do dentro con la misma prision y guar
como no sabe de alcalde, no conoce los das, y prohibicion de salir del apo
instrumentos de hechizos;, y asi sino sento que el mismo almirante, porque
es pan y vino y carne, todo lo demas por su medio no hubiese comunicacion
le parecen hechizos: tenia en el escri por escrito, ni de palabra con nadie;
torio pastillas, alcorzas, reliquias, pa tenia , fuera de su cuarto, despensero
peles curiosos, piedras bezares, palos y cocinero, y un repostero, y no sé si
de virtud, y cosas medicinales, un li otro criado, y otro que iba y venia por
brito cortadas las letras con sus pie lo necesario de San Torcaz á Alcalá, ó
dras de virtud, y polvos para los dien á Madrid; ninguno destos entraba en
tes, y otras cosas, y asi no le pareció su aposento, y cuando para alguna cosa
todo bien, y no sé si tomó los polvos muy forzosa era menester entrar algu
de dientes con duda si era veneno, ó no, ó el médico, ó el barbero, era ¿
hechizos, y asi no quiso que llenase lante de la guarda mayor, y otra guar
caja, ni cosa de escritorio, ni le pare da sin quitarse delante, ni cerrar el
ció se le diese un librito de memoria, ojo, porque no es aquel lugar de dar,
ue pidió para continuar de sus peca ni tomar papeles ni recaudo de pala
¿ como dice que está en el que allá
envié.
bra, ni para escribir; y dos meses que
alli estuve, por órdenes espresas de
Díxome á mí aparte el buen don Su Magestad y de la Junta, lo guardé
Francisco, que no quisiera que leye asi, y aunque yo no comí con él nunca,
se en el libro algunos caractéres con pero el guardamayor siempre, y ser
que se volase por el cañon de alguna vian á la mesa el criado que tenia en
chimenea: parecióme todo esto de per su encerramiento y un par de guardas,
la, como no se falte á la caridad de la y estos tomaban y daban los platos, y
salud de la persona: pidióme suplicase el recaudo á la primera puerta del
á W. S. I, si fuese posible se le volvie cuarto, que salia al corredor, donde
se su libro de pecados, y si entretanto estaba el aparador, porque el cuarto
no tenia inconveniente se le diesse tenia cinco piezas, y ni en la primera
otro de memoria. no entraba nadie sino las guardas, ni
Preguntéle si tenia papeles en Por allá salia el almirante sin las guardas,
taceli y díxome, no hallaria uno y que las cuales asistian en el corredor, y en
la llave de lo que alli tenia recluso la primer pieza, y en los demas dexa
quedaba entre las que quedan en el ban al almirante, y á sus criados,
escritorio, si se hubiere de hacer algu eran gruesas con sus rejas de hierro
na diligencia advierto dello. y muy seguras; tenian nombrado por
Tambien que en el envoltorio que la junta confesor particular ¿ le
va de cifra se hallarán para entender, confesase, y sacerdote que le dijesse
una para el duque que tenian cifras, y misa, y comulgase las fiestas; y nada
DON RODRIGO CALDERON. 379

de esto habia de hacer otro salvo el sas contenidas en los papeles, y con
nombrado por S. M.: no escribia ni sultas que ahi van tocantes á Agustin
tenia, recado para escribir, ni se le de Avila, alguacil que fué de córte, y
permitia dar ni recibir carta, billetes, que un retrato que ahi va en una ca
ni papel; y si alguno era forzoso se jilla de la reina nuestra Señora des
pedia primero licencia de la Junta en pues de muerta, Su Magestad tenia
Madrid, y alli se ordenaba lo que con noticia dél, y aun creo dixo se habia
venia; quitando ó poniendo en esto lo copiado para Su Magestad del Rey
¿ convenga, es menester enviar ór Nuestro Señor. Suplico á W. S. I man
en de todo al caballero que le tiene óde que todo lo contenido en estos in
tuviere á su quenta: la fuente que ventarios que agora envio, se entre
tiene es una llaga de pobre y enco gue por mandado de W. S. I. á quien
nada; bien ha menester curarla, que me dé recibo de todo, porque le dí yo
si se cierra no dudo que se muera. ante escribano al mismo , marqués, y
Las guardas de don Francisco ayuda aunque le he regalado en la prision no
rán , lo que pudieren; pero advierto estoy seguro de que me pida algo, ó
tambien en qué guardas ó criados de otro que le quiera bien, y me halle sin
don Francisco han de entrar y ayudar; ello, ni resguardo.—El licenciado DoN
es menester cómites y señalarlos de FERNANDo RAMIREz FARIÑAs.
confianza, porque sino tambien harán
lo que él quisiere las guardas, los pa El alcalde de córte don Fernando
ges y criados de don Francisco como de Irazabal, hombre de tan cortos al
los suyos, y mas si de fuera los benefi cances como hemos visto que le juzga
cian con dineros; y en esto es menes ba el consejero Fariñas, no se separó
ter grandísimo cuidado. W. S. I. me un momento de su lado; y lo llevó al
perdone, que he sido largo con celo de castillo de Montanches en Estremadu
servir á V. S. I. y escusarle trabajo de ra, distante treinta y ocho leguas de
buscar quien le de noticia de cosas se la córte. Observó con él, si bien todos
mejantes, que han pasado por mí. los miramientos debidos á su alta cla
Tambien me dijo don Francisco que no se y posicion, un rigor estremo.
queria tuviessen dinero ninguno él ni El buen alcalde, como decia el con
sus criados, porque no tuviessen con sejero Fariñas, era tan crédulo que
º cohechar, no tiene esto sustancia pensaba que por medio de conjuros y
e remedio, digo, el quitarles que no cábalas podria don Rodrigo volársele
tengan dinero, porque quando se les por el cañon de alguna chimenea si le
quite un dia lo que tuvieren, otro no dejaba algun libro, ó usar de los ino
se lo quitarán, ó no se sabrá donde lo fensivos polvos que para aseo de sus
tienen, antes es mejor que haga pun dientes conservaba don Rodrigo. Cuan
tualmente pagar sus guardas y ten do se ve á un magistrado de la altura
ga á la mano dinero para las costas, y categoría de don Francisco Irazabal
correos y gastos que fueren menes con semejantes ideas no hay por qué
ter. V. S. I. se servirá que en todo se estrañar que se haya formado una cau
dé órden, y á mí de mandarme. ca acusando de hechicero á un minis
Allá tengo consultas para cáthe tro; y valiéndose de esta inconcebible
dras, y visita, todo se embaraza en el acusacion como uno de los medios pa
consejo cuanto suplico. Doña Bernabe ra para llevarle al cadalso.
la besa los pies de V. S. I. que guarde Encerrado estrechamente con guar
Nuestro Señor como deseo. De Valla dias de vista en el castillo de Montan
dolid, febrero 23 de 1619. ches fué don Rodrigo, permaneciendo
Díjome tambien, y dixo ante escri alli incomunicado con gran custodia y
bano y don Francisco que unos pape con mas rigor que el que habia menes
les encuadernados que ahi van que son ter su persona sin hablarle ni escri
ciento diez fojas con el índice, que birle.
tratan de cosas de Roma, convenia el Alli una noche oyó á un desconoci
secreto dello al servicio de Su Mages do trovador que al pie de una ventana
tad, º Su Magestad habia tambien y al sonido de una bandurria, cantan
mandado se tuviese secreto de las co do, le dió entender que uno de los
380 CAUSAS CELEBRES.

principales delitos que se le atribuian, del marqués, prometiéndole por el co


y por el que trataban de perderle sus nocimiento é intervencion que habia
enemigos era el suponerlo cómplice en tenido en sus cosas, que él manifesta
la muerte de la reina verificada doce ria que siempre habia obrado en ser
años antes. vicio de su rey, y salvaria la reputacion
Al mismo tiempo que se habia pre de aquel hombre, que era contra la que
so en Valladolid á don Rodrigo Calde mas se habian ensañado sus enemigos.
ron, se habia verificado en Madrid y El rey Felipe III, recibió la carta del
en Valladolid con un desusado rigor la cardenal; la consultó con su ministro,
confiscacion de todos sus bienes, sin y creyó que seria conveniente que el
dejar en Madrid á la marquesa y á sus cardenal Trejo viniese áMadrid porque
hijos materialmente con que poderse de este modo lo apartaba de Roma,
cubrir, arrojándolos de la casa en que donde era grande su influencia y auto
Vl Vlan. ridad con la sede apostólica, para que
Inmensa fué la afliccion de la mar no intercediese con el papa; y al mis
quesa y de sus hijos, no encontró con mo tiempo se sabia que en las diversas
miseracion en nadie; y aquella señora ocurrencias y crísis que habian ocurrido
º antes las personas mas altas y po en el ministerio durante su estancia en
erosas de la córte se apresuraban á España, su buen tacto y perspicaz in
festejar, y mendigar una sonrisa suya genio habia sabido ofrecer pronta y fá
de favor y complacencia, se vió no solo cil salida. Era pues, un hombre temi
abandonada de todos, sino despojada de ble para los enemigos de don Rodrigo
todas sus riquezas, y sin tener aun lo Calderon en Roma, porque podia mo
estrictamente necesario para sostener ver al papa á tomar parte en este asun
su existencia y la de sus desventura to, y tambien á los cardenales favora
dos hijos. bles á España; y la recomendacion del
Acudió al amparo de estos don Fran papa y de los cardenales era de gran
cisco Calderon, comendador mayor de dísimo peso para un rey que cifraba su
Aragon, padre del desgraciado don Ro principal blason en ser tenido en el
drigo, los llevó á su casa, trabajando mundo por .piadoso, y que oia con la
con ellos en solicitar la libertad de su mayor deferencia á todas las personas
desgraciado hijo, y defender su causa. eclesiásticas.
La noticia de la prision de don Ro Vino el cardenal de Trejo á España,
drígo se estendió en breve por toda Es— pero apenas habia tenido la córte noti
paña. Causó la mas grande afliccion cias de que habia desembarcado en
en el anciano duque de Lerma, el que Barcelona y que se dirigia apresurada
aun alejado del poder, empleó en la mente por Castilla á Madrid, se le em
córte la influencia que podia tener bió á decir que se retirase á Burgondo,
para recomendar á su desgraciado fa de donde era abad, y que permanecie
vorito. se alli hasta que recibiese otra nueva
La noticia de esta prision llegó tam órden. Asi lograban los enemigos de
bien á los paises estrangeros, penetró don Rodrigo tenerle separado de Roma,
en Roma, donde se hallaba el cardenal donde era mucho su poder y autoridad
don Gabriel de Trejo, tio de la muger y al mismo tiempo alejado de Madrid
de don Rodrigo, persona de grande au para que no pudiese hablar con el rey,
toridad y estimacion en aquel sacro ni influir con los jueces.
colegio, no tanto por su dignidad como Hicieron publicar los ministros de
r las altas luces y capacidad de que la junta de Madrid pregones, impo
se hallaba adornado. Aquel hombre niendo grandísimas penas á los que
que habia debido la púrpura al des ocultasen algunos de los bienes ó dine
graciado prisionero, fué el único que ro de don Rodrigo Calderon; y con es
no le olvidó en su desgracia, y trató tas amenazas descubrieron gran parte -
de poner toda su vida, su honra y su del caudal que con prevision habia
favor para salvar á su bienhechor. ocultado entre sus amigos el mismo
Escribió al rey Felipe III, instándo Calderon. Los Fúcares, riquísimos ban
le para que le concediera licencia para queros de aquella época, y los genove
venir á la córte á defender la causa ses entregaron cuantiosas sumas que
DON RODRIGO CALDERON. 38

en ellos tenia depositadas. Formose Grande fué el asombro ¿ causó


despues un inventario de lo que tenia no solo en España sino en toda Europa,
en la córte y en Valladolid, y se en la prision de don Rodrigo, Calderon,
contraron grandes riquezas, gran can cuyo valimiento era conocido en todas
tidad de caballos, carrozas y alhajas. las naciones, y que habia adquirido
Solo en una casa de un amigo de
don Rodrigo en Valladolid, la de don Seis sortijas de oro y en ellas 6 diamantes
Fernando de Escobar de quien se pre grandes. -

Una joya de oro, con 13 diamantes.


sumia que por su intimidad con el des Una bolsilla de oro de rosario, con 46 dia
¿? valido tuviese ocultos algun Inantes.
inero y alhajas, en un escrupuloso re Un aderezo de gorra, con 152 perlas muy
gistro que hizo don Fernando Ramirez grandes.
Fariñas se descubrieron en un hueco Dos arracadas de oro, con 32 diamantes.
tabicado de una pared dos arcas y dos Dos granos de perlas para las orejas á mo
do de cermeñas almiceleñas, con un diaman
cofres llenos de riquísimas joyas, dia te cada uno.
mantes y plata labrada (1). Unas arracadas de esmeraldas, con 18 dia
mantes.
Una sarta de perlas gruesas de seis vuel
(1), Copiado de un manuscrito de la Real tas.
Academia de la Historia.
Un cintillo de oro, con 72 diamantes.
Un niño Jesus de oro, con 9 diamantes.
Inventario que el señor don , Fernando Un rosario de perlas gruesas.
Ramirez Fariñas mandó hacer de lo conteni Unas memorias, con 45 diamantes.
do en dos arcas y dos cores pertenecientes d Dos sortijas de 2 diamantes grandes.
don Rodrigo Calderon, y que estaban tabica Otra con 27 diamantes.
das en un hueco de la pared de casa de don Unas arracadas, con 12 diamantes.
Fernando de Escobar. Un estuche de oro, con muchos rubíes.
Un Agnus de oro, con 8 diamantes.
Primeramente: un apretador en forma de Un relox de oro y caja de esmeraldas,
corona, con 304 diamantes. con 47 diamantes.
Mas otro apretador de oro, con 41 dia Otro de cristal y oro.
mantes. Otro de ágatas y oro.
Mas otro, con 141 diamantes. Otro de cristal y oro.
Doscientos botones de oro, con un diaman Un perro de aguas de oro, con 73 dia
te cada uno. mantes.
Un espejo guarnecido de oro. Una imágen de Nuestra Señora, de oro,
Unas arracadas, con 12 diamantes. con 40 diamantes.
Una joya de oro ovalada, con 34 diaman Unos brazaletes de oro, con 62 diamantes.
tes. Un delfin de oro y esmeraldas.
Una rosa de oro, con 147 diamantes. Una azucena de oro, con 16 diamantes.
Dos rosarios de oro, con 147 diamantes. Dos piedras bezares guarnecidas de oro.
Una rosa de oro á manera de lazada, con Dos cercos de oro.
62 diamantes. Una cintura, con 264 diamantes.
Otra de la misma traza, con 53 diaman Un librillo de oro, con 6 diamantes.
tes. Cuatro cajas de plata.
Una cruz á modo de pectoral, con 15 dia Un aguamanil de plata dorada.
mantes. Una bota de plata.
... Una cadena de oro pendiente de ella un Una calderilla de plata.
niño Jesus, con 44 diamantes. Un platillo, calderilla y jarro de plata.
Úna cadena de oro y una joya pendiente Cuatro vasos de cristal y oro.
de ella, con 38. Dos cajas, una de plata y otra de la India.
Una sarta de perlas de quince libras. Dos juguetillos de oro.
Otra de perlas de ocho vueltas. Una caja de plata de filigrana.
Otra de siete vueltas. Un pomo de cristal.
Otras tres que tienen 516 perlas que son Una cajilla de la India con un serafin.
mº grandes. Una caja con dos cuchillos guarnecidos
de oro.
n Agnus de oro, con 29 diamantes.
Una taza de oro, con 8 diamantes. Unas cuentas de ámbar guarnecidas de
Una piedra bezar grande guarnecida de OTO.
0 T0
Una caja de plata á modo de ceston.
Una encomienda de San Juan en una pie Un rosario de dientes de caballo marino
dra rubia, con 44 diamantes. guarnecido de oro.
Una sortija de oro, con un diamante muy Otro de granates guarnecido de oro.
grande. Otro de ágatas guarnecido de oro.
Tres sortijas de oro, con 54 diamantes. 0tro de lapiz-ázuli guarnecido de oro.
382 CAUSAS CELEBRES.
-
-

tanta celebridad por su estremado lujo todas sus acciones, todos los papeles y
y magnificencia. todas las cosas con el mayor rigor y si
Mientras yacia abandonado de to gilo, pues todos los efectos secuestrados
dos estrechamente encerrado en Mon se habian puesto á su disposicion.
tanches, la junta se dedicó á pesquisar Hizo comparecer ante sí á muchos
grandes de España; se preguntó á con
Otro de cocos guarnecido de oro. sejeros, á títulos, á caballeros, á hom
Otro de plasma de esmeralda guarnecido bres plebeyos, no perdonando ni aun á
de oro. las mugeres, no respetando ni aun á
Otro de ágatas guarnecido de oro. las damas de Palacio, inquiriendo es
Otro de ébano guarnecido de oro. crupulosamente de cuantos se hallaron
Otro de ámbar ensartado en oro.
Otro de amatistas guarnecido de oro. en la enfermedad de la reina, si podia
Otro de cocos guarnecido de oro con seis haber tenido la mas remota parte en
piezas en él, con 64 diamantes.
Dos bandillas de oro.
su desgraciada muerte don Rodrigo.
Otra de oro escarramada.
Llegaron hasta preguntar á la condesa
Otra bandilla de oro. de Lemos, camarera mayor, que no se
Mas tres bandillas de oro. habia separado ni un instante del le
Tres cofrecillos de tortuga guarnecidos de cho de la reina doña Margarita, y esta
p ata.
Una imágen de Nuestra Señora, de plata. señora, con aquel noble espíritu y va
lor que la constituian una de las pri
Otra de plata y oro.
Seis ¿ de agua de cristal, con oro. meras mugeres de su época, contestó
Una frasquera con dos frascos de cristal. que cuanto la reina habia tomado en su
Una salvílla de cristal y oro. enfermedad habia pasado por sus ma
Una cadena de oro. nos, y que jamás se la habia pasado por
Diez y ocho piezas de cristal, algunas con la imaginacion que nadie hubiese in
OT0.
tentado atentar á su vida.
Una cadena de oro y perlas. En lo relativo á la muerte de Jua
Un rosario de calambuco guarnecido de
00, ra, la mayor parte de las personas á
Otro guarnecido de oro. quienes se les preguntó, respondian.
Una joya de diamantes de oro. que lo habian oido decir, pero que no
Ciento cincuenta botones de oro.
Una cadena gruesa de oro.
podian asegurarlo; que seria uno de
Una cruz de ébano y oro. esos rumores públicos con que se acu
Diez y ocho relicarios de oro. saba á don Rodrigo Calderon, de cuan
Una caja de plata y oro. tos sucesos desgraciados habian ocur
Una bandilla de oro. rido en la córte durante su favor.
Otra cadena gruesa de oro. Procuraron tambien los jueces in
Un jarro de rinoceronte, con plata.
Tres vasos de unicornio, con oro. quirir otros varios cargos de muy poca
Dos piezas de oro para beber. consideracion; y no se contentaron con
Una venera grande de oro con una sirena esto, sino que trataron de apurar has
de mar, de gran peso y valor. ta las sombras mas remotas en que pu
diera ocultarse algun delito, para lo
Memoria de las vasijas y fuentes. cual hicieron venir de diversas partes
del reino y del estrangero á varias
Aguamaniles, jarros, papelinas y piezas de personas, aun de Alemania y de las
beber de varias y diferentes hechuras, exce Indias. -

lentemente labradas, blancas y doradas de


lata, que pesaron 840 marcos y valen mas Pusieron presos á los criados de
as hechurás de las mas dellas ¿ el peso, don Rodrigo apremiándoles con estre
sin otra cantidad de vasijas de vidrios de va chas prisiones, y examinaron con el
rios colores, guarnecidos de oro y plata que mayor detenimiento todos los papeles
por evitar prolijidad no se espresan, y han de que se le habian cogido, reconociendo
advertir que las piezas de plata que pesan
los 80 marcos valen las mas de ellas á vein atentamente sus alhajas y escritorio,
te ducados el marco por estar excelentemen presumiendo hallar en ellos alguna cosa
te labradas y doradas, llenas y, sobrepuestas
de oro, esmaltadas, de variedad estraordina
ria. Y asi mismo, se advierte que en las de mantes como las perlas y apreciar las hechu
unas joyas y perlas no se ha hecho mas que ras por ser inestimable el valor de algunos
numerarlas, porque cada una de ellas su jus diamantes y perlas y ser menester para ha
to valor es menester quilatarle, asi los dia cerlo mas de quince dias. " -
DON RODRIGO CALDERON. 383
Al

que pudiera revelar sus aficiones y 1 por prelados venerables que, ó eran
estudios en la mágia, que era uno de unos solemnísimos ignorantes ó unos
los cargos mas principales de que se le bribones, lo que no podemos creer,
culpaba. viendo su vida moral y ejemplar como
Imposible parece que magistrados un testimonio negativo de esta supo
que ocupaban los mas altos puestos del Sl C1On.
Estado, que pasaban por eminentes Asi que la junta ofreció un espec
jurisconsultos en aquella época y que táculo ridículo, cuando entre los di
como tales se habian distinguido en los versos testigos llamados á deponer
tribunales y en las cátedras de las uni sobre lo que se hallaba en aquella
versidades, diesen crédito y se ocupa misteriosa caja, se llamó á don Manuel
sen de cosas de que se avergonzaria de Mora, marqués de Castel-Rodrigo,
hoy en creer y ocuparse el hombre hijo del magistrado probo é inteligente
mas vulgar, el menos entendido en los habia sido presidente del Consejo
principios de las ciencias. Muchos lan e Castilla en el reinado de Felipe II.
ces pudiéramos referir que escitarian La junta, compuesta de aquellos res
la risa de muestros lectores, si no se petables y graves magistrados, le pre
tratase de una causa en que se iba á guntó con grande apremio y dignidad
decidir de la vida y de la reputacion si sabia lo que podia ser el contenido
de un hombre que por veinte años ha de aquella caja.
bia ocupado los mas principales pues El jóven don Manuel de Mora no
tos de la monarquía. pudo menos, á, pesar del respeto que
Hemos dicho ya, que al prenderle inspiraba aquel Areópago, de soltar la
en Valladolid el bueno del alcalde don carcajada manifestando que lo que tan
Francisco Irazabal con la mayor can to les habia ocupado, lo que tanto ha
didez, ó mejor dicho, con la mas estú bia llamado su atencion, era una caja
pida ignorancia, creia que una caja de de hilo de Portugal de las que se acos
¿ para los dientes eran polvos de tumbraban en aquel reino á regalar, y
echicería, y le habia quitado los libros que en su casa tenia muchas como ella,
or temor á que se escapase por medio lo que podia comprobar poniéndolas á
¿ conjuros el dia menos pensado por disposicion del tribunal.
el cañon de la chimenea. Digno de fi Tan ridícula solucion tuvo uno de
gurar con estas simplicidades es lo que los cargos que aparecian mas graves,
ocurrió un dia en la junta. Habiendo el de la hechicería, y como este hubo
encontrado una caja de hilo con algu otros diversos, debiendo de quedar
nas figuritas muy adornadas y elegan corridos los jueces!!!
tes, escitó el mayor pasmo y admira El 20 de febrero de 1649 fué preso
cion, creyendo que era una caja que en Valladolid, como hemos visto, don
contenia misterios de hechicería, y Rodrigo Calderon, y el 26 de abril de
aquellos graves, doctos y sesudos jue aquel mismo año salió de Madrid el rey
ces, haciendo de una cosa tan sencilla Felipe III para hacer su jornada á Por
una gran cosa, llamaron á muchas per tugal con toda su córte sin mas objeto
sonas para informarse de qué seria político que hacer reconocer y jurar
aquello, y si bajo aquellas figuras ale en las cortes portuguesas al príncipe
góricas y aquellos hilos se encontraria don Felipe, su hijo.
alguna mágia ó brujería. Acudieron mu El principal testigo que podia de
chas personas que se tenian por esper poner en la causa de don Rodrigo era
tas y todas dijeron que no sabian qué el mismo rey Felipe III. Su marcha tan
era aquello, y que no consideraban pu á los principios de la investigacion con
diese ocultarse alli alguna malicia. Pasa tra don Rodrigo fué una calamidad pa
ba esto en un siglo en que se celebra ra este. El rey aunque habia separado
ban con frecuencia autos de fé, donde de su lado á los dos validos, el duque
se condenaba á la hoguera á desgra de Lerma y don Rodrigo, siempre les
ciadas viejas por brujas, dándolas por conservaba algun afecto. Asi es que,
convictas de haber volado y otros es príncipe eminentemente piadoso y de
cesos, como hemos visto en algunas de voto, tenia la costumbre de renovar
las causas seguidas por la Inquisicion, todos los años su testamento para te
384 CAUSAS CELEBRE3.
=-e

ner una ocasion de pensar en la muer-peticiones que le habian hecho las cór
te todos los años, y al hacer esta reno tes con gran descontento de los portu
vacion dejaba por testamentario á don gueses, dió la vuelta á Castilla el 29
Francisco Sandobal y Rojas, duque de de setiembre de aquel mismo año de
Lerma y declaraba que le habia servi 1649.
do bien y fielmente como se encontra En Estremadura visitó los princi
ria entre las escrituras y papeles de pales monasterios, entre ellos el de
Estado que conservaba reservadas en Guadalupe, y parecia daba felíz térmi
su escritorio. no su regreso á Madrid, cuando á una
En el ínterin hacia ya un año que jornada ya de la capital en el pueblo
se hallaba estrechamente encerrado en de Casarrubios del Monte, cayó grave
el castillo de Montanches don Rodrigo mente enfermo.
Calderon sin comunicacion alguna, se Parecia inminente su muerte, em
parado de toda su familia, víctima del pero habiendo traido á la régia estan
ódio de sus enemigos. El rey, que ha cia el cuerpo de Isidro Labrador, pa
bia ido á la espedicion de Portugal, tron de Madrid, comenzó á mejorarse
recibia frecuentes cartas reservadas á sensiblemente en términos que pudo á
su persona, de los magistrados que los pocos dias continuar la marcha
formaban la junta para entender en la hacer su entrada en Madrid el 4 de
averiguacion de la conducta de don diciembre. Una de sus primeras ocu
Rodrigo Calderon. En ellas le decian paciones fué en agradecimiento á Isi
que por mas que escudriñaban con la dro, el activar poderosamente en Ro
mayor diligencia y actividad la materia ma la causa de su canonizacion.
nada habian podido encontrar. Habian Apenas se habia restablecido el
visto, pues, que de la informacion se rey de la penosa enfermedad que le lle
creta nada podia resultar; era necesa vóá las puertas de la muerte, cuando
rio apelar á un juicio formal con todos uiso á los dos dias de llegado á Ma
los trámites y solemnidades de la ju rid atender á la causa del marqués de
risprudencia. Siete Iglesias, de aquel favorito á quien
Salió como hemos dicho Felipe III tanta amistad habia dispensado y que
de Madrid el 26 de abril con el príncipe, se hallaba tanto tiempo padeciendo en
los infantes, los grandes, títulos de el castillo de Montanches. Mandó que
Castilla y con su fastuosa córte entran fuese la junta á Palacio el dia 6 de di
do por Estremadura en Portugal, re ciembre á las nueve de la noche, pues
corriendo por debajo de suntuosos ar deseaba enterarse por sí mismo de todo
cos de triunfo las mismas ciudades y cuanto se habia averiguado y hecho en
pueblos que su padre Felipe II habia el negocio.
recorrido cuarenta años antes, despues Entraron los ministros de la junta
de la conquista de aquel reino. Lisboa, en la cámara del rey Felipe III, el que,
que le hizo la pretension de ser la capi despues de haberle besado la mano
tal de todos los dominios y reinos de puestos de rodillas, les mandó sentar
España, desplegó tan maravilloso lujo, despidiendo á todos los de la servi
que el monarca castellano quedó asom dumbre quedando enteramente solo
brado, y admirados todos los de su córte con ellos, y cerradas las puertas de la
y los estrangeros. El 18 de junio jura cámara, dijo: García Perez de Araciel,
ron las córtes portuguesas al ¿ fiscal del consejo y de esta causa, ha
blad. .
don Felipe como heredero y sucesor del
reino, juramento que habían de violar Entonces García Perez de Araciel,
rebelándose contra él cuando llegase á tomando la palabra dijo (1):
ocupar el trono por la muerte de su Señor; habiendo V. M. mandado á
padre. las personas que estamos aquiaverigua
Recorrió Felipe III las principales sen y con mucha diligencia examinasen
ciudades de Portugal, visitó los mas la causa contra don Rodrigo Calderon,
célebres conventos, asistió en Evora á marqués de Siete Iglesias, acumulando
un auto de fé que le presentó la Inqui
sicion como el obsequio mas agrada (1) Manuscrito de la Real Academia de la
ble, y de repente, y sin resolver las Historia.
DON RODRIGO CALDERON. 385
-
-

toda la industria y prudencia humana ayer fué grande don Rodrigo, querido
en esta parte nada puede haber mas con aplauso de los hombres de estado
vigilante, cuidadoso y recatado que lo en que le colocó su fortuna, hoy no le
que ha sido en esta causa. En lo tocante admiran menos.
al delito mas capital de que se le hace Todas las personas de ambos sexos
cargo y de que le han querido hacer reo relacionadas con esta causa, que po
agresor, han sido preguntados y escru dian hallar ó descubrir algun rastro,
pulosamente examinados todos los gran todas se han examinado de todo que
des, títulos, caballeros y otros criados tal pudiera ser; especialmente las que
de la casa y córte de V. M. que han tra se hallaron en la enfermedad y no se
tado y comunicado muy de cerca y es apartaron del lado de la reina y no fal
trechamente conocido al marqués des taron por razon de su oficio con toda
de que entró en este palacio á servirle, vigilancia, y todas esconden su juicio
y cuando oyeron decir y preguntar co en esta parte, y dicen que tal no saben:
sas fuera de la fidelidad en que de innumerables son á los que en esta
be ser reputado un buen vasallo, se causa se han tomado sus dichos: todos
admiraron y quedaron como hombres repugnan el interrogatorio siendo to
que aun se ofendieron en cierta mane dos de partes y calidades. No nos he
ra con pregunta semejante , y su , res mos contentado con esto; á los médicos
puesta fué: que esto no habia sido ni que hoy viven, se les ha rigorosamente
Dios quisiera que asi quedase mancha apretado y todos fundan en los precep
da la honra y reputacion de tal criado, tos de la medicina y de la naturaleza
no hallando razones y conjeturas para de la causa que su muerte fué natural
que esto pudiese ser y antes muchas y no violenta y que en todos los acha
para que no lo fuese, el que tenian por ques no vieron señal ni movimiento
buen caballero, religioso y cristiano y que pronunciase tal cosa, porque es
fiel vasallo de su príncipe, y que siem muy natural y muy contingente caso
pre le habian visto deshacerse y pre morir muchas mugeres de sóbreparto;
cipitarse por su servicio y por el bien que hay infinitos ejemplares en todos
comun sino era con gran riesgo de su los de la facultad y ciencia, y que an
conciencia, de lo que debia á las obli tes se espantan como vive ninguna mu
gaciones que profesaba de cristiano y ger que pare, siendo por todas razones
á la sangre de que descendia: y de esta este accidente mortal, pues en ninguna
manera era generalmente la confesion parte se admira la virtud de la natura
de todos. leza como en este, á quien mas que otra
Hase preguntado á sus enemigos: cosa se debe la felicidad y salud de es
responden que en cuanto este punto no ta obra, como por el contrario si falta
lo son porque no hallan que en hombre nunca surte buen efecto; antes, exa
humano pueda caber cosa como esta sin minando los remedios que se la halla
que tuviera al cielo en su defensa: pues ron y se la hicieron y á todos los que
cuando para castigar los malos reyes estuvieron presentes para disponerlos
destina Dios los corazones y los brazos aplicarlos, todos responden que es
de prodigiosos vasallos, no en los de impertinente la pregunta, que no hu
España, aunque en los de otros, hay biera hombre tal que se atreviera á
mucha dilacion para ejecutarlo sin el roponer tal género de maldad y que
juicio inescrutable: aqui se encoje y o hicieran pedazos: mucho se ha hecho
abate nuestro entendimiento cuanto en esto, mucho se ha trabajado y mu
mas en reina tal que era el asilo y des cho escudriñado, desenterrando, revol
canso de sus vasallos y es de tan nota viendo y averiguando en su casa, en
bles y lucidas partes como todos vie sus papeles, escritorio y criados, y en
ron, por lo cual y por sus propias vir todo esto no se halla cosa de sustan
tudes se supo hacer tanto lugar en el cia que se diga, señor, hay sospecha:
mundo. si, ligera y livianamente la envidia y
Preguntando á sus ¿ porque la pasion , concitadas solamente de la
en esta causa nada se quede olvidado º y el lugar que ha tenido el mar
en la diligencia, responden; que en su ques.
ignorancia es este testimonio y que si Muchos hombres se han traido dº
49 -
386 CAUSAS CELEBRES.

otros reinos, de las provincias mas re que tenian, mandaron que don Rodri
motas y apartadas que se conocen para go Calderon que se hallaba preso en
apear acrisolar mas esta causa. No Montanches, fuese traido á la fortaleza
sé que haya materia de donde se pueda de San Torcaz, para que teniéndole
asir: grande ha sido el cuidado, las asis mas cerca de la córte pudiesen tomarle
tencias, el desvelo, de todos; de muchas las declaraciones, pues hasta entonces
artes nos hemos valido, de muchas ase todo habia secreto y de nada se habia
chanzas que se han formado á personas dado conocimiento á don Rodrigo, y
de quien se pudiera sacar la verdad y para proveer con mas prontitud sus
todas han depuesto en la ignorancia de órdenes, y hacer se cumpliesen.
a agresion y abono del que padece: un Trajéronle con el mayor cuidado y
año ha, señor, que los ministros de recato, muy bien guardado, y lo trasla
quienes hizo eleccion V. M. catan y daron á la fortaleza de San Torcaz.
asisten á este negocio sin levantar la Desconocido parecia en su persona
mano dél las noches y los dias y no se don Rodrigo Calderon, porque habia
ha hallado mas que lo que á V. M. se le enflaquecido considerablemente, y de
ha dicho. La muerte de Francisco Jua jádose crecer las barbas desde el dia
ra que mandó hacer se le ha proba ¿ habia entrado en aquella prision,
do. V. M., en la relacion propuesta, de hacia que estaba año y me
mandará lo que mas fuere de su volun l0s

tad y servicio. Aun les pareció á los jueces que San


Asi habló el fiscal García Perez de Torcaz se hallaba muy distante de Ma
Araciel; mas tarde veremos á este ma drid, y resolvieron traerlo á la córte,
istrado acomodaticio al aire del poder señalándole por prision su misma casa,
¿ en un sentido diametralmente dando la guarda de él á don Manuel de
opuesto, tan vehemente ahora en su Finojosa, caballero de la órden de San
tiag0.
defensa como violento y temerario des
pues en su acusacion. ntró don Rodrigo en Madrid, y su
El rey quedó satisfecho del estado venida causó grande jubilo á sus ene
que tenia la causa del marqués. En su migos, porque creian, y con razon, que
ánimo se combatia la idea de querer era el preludio de su irreparable pér
lo ver libre y al mismo tiempo la de dida. Entró en su casa propia, que se
bilidad de ceder á las sugestiones de hallaba situada en la calle Ancha de
sus enemigos. Para salir de este esta San Bernardo, esquina á la de la Luna,
do de lucha en que se hallaba su áni y entró en ella de muy diferente modo
mo, mandó que la informacion se con que solia entrar y salir un año antes.
virtiese en una causa que siguiese por Entonces le acompañaba siempre mu
todos sus trámites. Manifestó á la junta cha gente , noble; veíase cercado de
que se daba por servido de lo que ha criados y de pretendientes, y de los
bia trabajado y que deseaba continuase soldados de la guardia alemana, cuyo
por todas las vias y maneras ordinarias gefe era, que al entrar y salir le tribu
sin consideracion alguna y como pu taban los honores militares.
diera procederse con el hombre mas Subió la escalera de su casa y nada
¿id y de mas abyecta condicion; vió de esto. Al entrar en las piezas las
por que de esta manera si era inocente vió todas sin los cuadros, despojadas
resplandeceria mas la reputacion del de los ricos muebles y magníficas alha
marqués de Siete Iglesias, y si era cul jas que las adornaban. No encontró alli
pable cumpliria él como rey haciendo ni á su muger, ni á sus hijos; y pasan
justicia. -
do por las desiertas habitaciones se vió
Despidiéronse los jueces, saliéndo encerrado en la mas apartada estancia
se de la cámara; y habiéndose reunido con diez y ocho guardias, de las que era
en seguida para consultar las intencio cabo y guardia mayor don Manuel de la
nes del rey, conocieron que estas Finojosa caballero de la orden de San
eran, que lo que hasta entonces ha tiago.
bia sido una inquisicion secreta de los La sala en que fué colocado era una
hechos, se elevase á un proceso y cau sala oscura: se hallaba cerrada de dia
sa formal: y en virtud de las facultades y de noche, siempre con un centinela
D0N RODRIGO CALDERON. 387
es:=

que se remudaba de dos en dos horas, pital, el de la muerte de la reina doña


un criado que sin salir de alli se Margarita. Entonces don Rodrigo le
estinó para servirle. Cerca , de esta vantó los ojos y las manos al cielo, y
sala habia otra que le servia de orato respondió que jamás habia hecho nada
rio, al que salia á oir misa con todas contra aquella augusta señora.
las guardias, y en otra pieza inmedia Preguntáronle despues si habia
ta tenian los jueces su tribunal, donde mandº matar á un hombre plebeyo
se reunian para todas sus deliberacio llamado Francisco Juara, y respondió
nes. En las piezas contiguas se hallaban que sí: que se hallaba dispuesto á con
repartidas las guardias con su gefe. fesar la verdad, como confesaba aque
No habia en la sala que servia de llo, en cuanto hubiera delinquido; que
prision á don Rodrigo mas luz que dos aquel hombre por sus insolencias con
velas encendidas sobre un candelabro él le habia dado motivo y ocasion á
dorado; y no se abria aquel fatal y tris hacerle matar; que si hubiera sido
te aposento sino para mudar la guardia un hombre noble y de calidad le hu
y entrar la comida y cena, cuyos actos biera retado cuerpo á cuerpo y le hu
precisamente presenciaba el gefe de biera dado muerte, pero que no tenien
ella. Se le servian manjares en abun do ninguna de las cualidades que pu
dancia y con delicadeza, y queso en dieran hacerle acreedor á que él mi
todas las comidas, al que era suma diese con aquel sus armas, habia man
mente aficionado. dado que uno de sus amigos lo hiciese,
No se permitia que nadie le habla habiéndose visto precisado á volver de
se mas que su confesor á solas, porque esta manera por su derecho.
hasta sus letrados y procuradores te Preguntáronle otras cosas de leve
nian que hacerlo con asistencia de las momento é importancia, y despues le
guardias. Asi es que uno de los mayo mandaron retirar al cuarto donde es
res tormentos que tuvo don Rodrigo taba encerrado.
fué verse aprisionado, sin luz, en la Dos causas á la vez se le seguian á
mas espantosa soledad, en aquella mis don Rodrigo Calderon por el tribunal
ma casa donde tanto habia brillado por escepcional creado para juzgarle por el
su magnificencia; donde apenas habia rey Felipe III, el que todos los dias
¿ para dar cabida á los grandes y se reunia en la habitacion contigua
nobles que de todas partes, y de los donde yacía solo, abandonado de todo
diversos reinos que entonces domina el mundo, sin permitirle ni aun verá
ba la España acudian á hacerle la su esposa é hijos, el desgraciado mar
córte. -

qués de Siete Iglesias; la una era la


Al dia siguiente de su llegada, los causa civil propiamente de visita en la
individuos de la junta, que habian, co que llegaron á hacerle hasta doscien
mo hemos dicho, instalado su tribunal tos cuarenta y cuatro cargos de faltas
en una de las habitaciones de la mis y abusos en el desempeño de su oficio
ma casa que servia de prision á don durante el tiempo que fué secretario
Rodrigo Calderon sentados al rededor de la cámara del rey; y la otra mas
de una mesa en forma de tribunal, le grave, cuya tendencia era directa con
hicieron comparecer á su presencia. tra su persona, criminal por desacato
Presentóse don Rodrigo ante aque al rey y á la reina; por haber hecho
llos hombres, que alguno de ellos, es sobre su corto patrimonio una inmen
pecialmente el presidente, le habia so sa fortuna; por haber usado de hechi
licitado muchas veces sus ascensos y zos y con ellos procurado atraer las
adelantos, y alli en pie y con la cabe voluntades del rey, del duque de Ler
za descubierta tuvo que contestar á ma y otras personas; por haber man
las diversas preguntas que le hicieron dado asesinar á un hombre llamado
para examinarle por los artículos ordi Francisco Juara; por conato de haber
narios que mandan las leyes, respon dado veneno al confesor del rey, fray
diendo á todas con valentía y firmeza. Luis de Aliaga; por haber mandado
Despues que le preguntaron por algu matar á don Alonso de Carvajal, ca
nas culpas leves, á las que satisfizo, le ballero de Santiago, al padre Cristóbal
hicieron la pregunta del cargo mas ca Suarez de la compañía de Jesus, á Pe
388 CAUSAS CELEBRES.
º==
dro Caballero, á Alonso del Camino, y se tormento con todo rigor segun man
el cargo mas grave y fuerte de todos, daba la ley.
or haber contribuido á la muerte de Entonces en el dia 7 de enero (1620
a reina, la que se habia verificado en dispuestos á cumplir con la volunta
el Escorial hacia doce años, por acci real los ministros de la junta hicieron
dentes ocurridos en su sobreparto. venir al verdugo de Madrid, Pedro
No habia crímen ni muerte de im Soria, y traer á la sala que servia de
ortancia cometida en el transcurso de tribunal un potro y los demas instru
0s yeinte años que habia sido ministro mentos necesarios para el tormento, é
el duque de Lerma de que no se hiciese hicieron llamar á su presencia á don
un cargo á Calderon. Entretanto sufria Rodrigo Calderon. Con una sola mirada
éste con admirable resignacion y sere abarcó el desgraciado marqués el triste
nidad el rigor de su proceso. Oyéron y lastimoso espectáculo de que iba á ser
se muchísimos testigos de todas las cla la víctima. Presentóse pues, ante sus
ses de la sociedad; grandes, caballeros, jueces en aquella misma estancia en
empleados en el palacio, damas, médi que los veia sentados en donde él ha
cos, amigos y enemigos de don Rodri bia recibido los obsequios y la córte de
go; se buscaba en todas partes con el ma los principales grandes y nobles del
yor celo la criminalidad del desgracia reino, alli donde él habia distribuido
do reo. Este en sus confesiones negabalas gracias y los honores, tal vez á los
todos los crímenes que le imputaban y mismos que ahora con faz serena iban
únicamente confesaba el asesinato de á ordenar su tormento. Hiciéronle re
Francisco Juara, el cual ¿? por parar los instrumentos del tormento
el genio insolente que este habia teni que tenia delante, apremiándole á que
do, y porque, decia, era el tercero de confesase los delitos de que se le habia
los amores que con su esposa la mar— hecho cargo. -

quesa habia intentado tener un músico Don Rodrigo Calderon con noble en
llamado don Juan Diaz. Ni un solo de tereza confesó que nada tenia que de
clarante se habia encontrado que diese cir mas que lo que dicho tenia, y que
el menor indicio de culpabilidad en el de ello hácia testigo á Dios. Una y dos
crímen principal porque se le perse veces volvieron á molestarle los jueces
guia, en el crímen en que querian fun y una y dos veces dió don Rodrigo Cal
dar sus enemigos la sentencia de su deron con igual constancia y firmeza la
muerte, cual era la complicidad en la misma respuesta.
muerte de la reina á consecuencia de Mandáronle entonces desnudar, y
un sobreparto. el verdugo puso sus manos sobre aquel
Consultaron los jueces al rey el re hombre á quien antes se apresuraban
á vestir sus galas muchos pages, hijos
sultado de estas primeras diligencias, y
contestó el rey preguntándoles si ha de las principales y mas nobles familias.
bia que ejecutar alguna otra diligen Quedó enteramente desnudo aquel mi
cia mas. La junta respondió que la úl nistro, á quien año y medio antes ha
tima y postrimera que podia ejecutarse bian despojado de todos sus bienes, y
era darle tormento; mas que por razon á quien solo habian dejado un vestido
de los títulos y, condecoraciones que de tanta pasada riqueza, de tan magní
tenia, y por ser del hábito de Santiago fica opulencia.
seria contravenir al derecho, porque Desnudado por el verdugo, coloca
en las personas de calidad no se podia do en el tormento y encerrados sus
ejecutar tal género de pena, por los miembros en las vueltas del cordel que
privilegios é inmunidades, y adhesio penetraba en sus carnes y hacia crugir
nes hechas y concedidas por los reyes y romper sus huesos hasta saltar la san
y por las bulas de los papas, pero que gre de sus venas, sintiendo lleno de
sin embargo la voluntad del rey era agua su estómago, que á cuartillos in
ley, porque podia derogar y contrariar troducia violentamente por su boca el
todo cuanto estuviese dispuesto en fa verdugo, aunque quebrantado de muer
vor de las clases mas privilegiadas. te y de dolor, no pronunció una pala
-, Respondió el rey que no obstante bra mas, no declaró los crímenes cuya
las observaciones de la junta, se le die confesion querian arrancarle en me
DON RODRIGO CALDERON. 389

dio del dolor sus inhumanos jueces. la forma acostumbrada, la calidad y


Creemos que la mejor relacion de cantidad del qual reservaron en sí, y
esta terrible escena, página sangrien de le reyterar siempre que convenga á
ta y bárbara de la jurisprudencia de la buena administracion de la justicia,
aquellos tiempos, es la insercion lite y asi lo proveyeron y mandaron, ha
ral del auto de ejecucion del tormento biéndolo primero consultado á boca
que sufrió el marqués de Siete Iglesias, con el Rey Nuestro Señor, y lo señala
sacada de el archivo general de Si ron—(tiene tres rúbricas).—Ante mí,
mancas. (1) l—Lázaro de Rios.
En la villa de Madrid, á siete dias
En la villa de Madrid, á siete dias del mes de Henero de mil seiscientos
del mes de Henero de mil y seiscien veinte años, yo Lázaro de Rios, escri
tos veinte años, los señores licencia vano de Cámara de Su Magestad, leí y
dos don Francisco de Contreras, Luis notifiqué el auto de arriba á don Ro
de Salcedo y don Diego del Corral y drigo Calderon, marqués de Siete-Igle
Arellano, del Consejo de Su Mages sias, en su persona, á hora de entre
tad, á quien por su cédula real y par las nueve y diez de la noche, el qual
ticular comision están cometidas las dijo que lo oye, de que doy fé, testigos
causas de la prision de don Rodrigo el señor don Manuel de Hinojosa y To
Calderon, marqués de Siete Iglesias.— más de Eveto y Pedro de Beceril, es
Habiendo visto las informaciones y tantes en esta córte.—Lázaro de Rios.
averiguaciones hechas en la dicha cau Y luego incontinenti los dichos se
sa, y la culpa que dellas resulta con ñores del Consejo, jueces de la dicha
tra el dicho marqués, asi en lo que causa, mandaron que dicho auto de
toca á la materia de hechizos, como de tormento se ejecute sin embargo de la
haber pedido y ganado la cédula real respuesta dada por el dicho marqués,
de perdon de delictos º le dió Su y asi lo mandaron.
Magestad por el año pasado de seiscien Y luego incontinenti, yo el dicho
tos y diez y seis, como de la causa que escrivano de Cámara notifiqué dicho
tuvo para hacer la muerte de don auto al dicho marqués de Siete-Iglesias
Francisco de Xuara y haberle primero en su persona, y dixo:-Que no tiene
hecho sacar deste reino al de Francia, que decir.—Lázaro de Rios.
y de la que resulta contra él en lo to— Y luego incontinenti los dichos se
cante al proceso que se hizo contra ñores del Consejo, jueces de la dicha
Agustin de Avila, alguacil que fué des causa, mandaron que el dicho don Ro
ta córte, y muerte que se le dió; y la drigo Calderon, marqués de Siete
que resulta contra el dicho marqués de Iglesias, debajo del juramento que tie
las muertes de don Eugenio de Olibera ne fecho diga y declare, qué delictos,
y don Alonso de Rojas, pages que fue muertes, hechizos, venenos ó otros,
ron del cardenal duque de Lerma, y son los que ha hecho y cometido este
lo que contra él resulta de la muerte confesante, asi como ministro de Su
de la reyna Nuestra Señora doña Mar— Magestad, como antes y despues que
garita de Austria que esté en gloria: lo fué, por cuya causa y efecto pidió y
Dixeron: que dexando como dexan ganó la cédula real que le dió Su Ma
en su fuerza y vigor los indicios y pro gestad el año ¿ de seiscientos
vanzas que de lo procesado resultan diez y seis á su instancia y pedimento,
contra el dicho marqués de Siete-Igle en la cual están puestos dos renglones
sias, asi en los delictos referidos en la de la letra y mano del Rey Nuestro Se
caveza de este auto y mencionados en ñor, en que dice le concede la dicha
él, como las demas culpas y delictos remision y perdon en aquello que le
—que de ello contra él resultan, le con
gítimamente puede, y se le mandó diga
enaban y condenaron, en cuanto á los declare particular y distintamente
otros delictos referidos y espresados os delictos por qué para qué pidió la
que de suso se haze mencion, á tor dicha cédula, y cuáles son, y en qué
mento de agua, garrote y cordeles, en tiempo los cometió, contra quién y
dónde, y por qué causa, y por ¿
(1) Diversos de Castilla, legajo, núm. 34. mano, quién le ha dado favor y ayuda
390 CAUSAS CELEBRES.
=-=-===

en cada uno de ellos, y qué palabras dicho marqués, dijo -que dice lo que
fueron las que dijo contra el Rey Nues dicho tiene y que no tiene otro ningun
tro Señor y la Reyna Nuestra Señora, delicto mas del tocante á la muerte del
de que pidió el dicho perdon en la dicho Francisco de Xuara, y que á don
dicha cédula, lo cual quitó Su Mages Alonso de Carbajal se le encargó el ha
tad, que decia: «lo que hubiéredes di cer la muerte del dicho Francisco de
cho y decíades en deservicio mio;» con Xuara, el qual este confesante hizo ma
apercibimiento que no lo haciendo y tar por órden y medio del dicho don
declarando verdad, se executará el Alonso de Carbajal, por alcagüete, como
dicho auto de tormento que se le ha dicho tiene: y que al mismo don Alon
notificado á éste confesante.—Lo qual so de Carbajal le encargó el hacer sa
yo el dicho escrivano de Cámara noti car al dicho Francisco de Xuara de este
fiqué al dicho don Rodrigo Calderon, reino al de Francia cuando le sacaron.
marqués de Siete-Iglesias, en su per Y los señores del consejo, jueces de
SOna, à dixo que se afirma en lo que la dicha causa mandaron que el dicho
tiene dicho, en su confesion, en cuan marques de Siete Iglesias diga y decla
to toca á haber ganado la dicha cédula re que fué la causa y motivo, y en fin
de perdon, porque es puramente la ue tuvo en hacerse alguacil y pren
verdad, que las palabras que se pre ¿ por su propia autoridad y persona
gunta, que se decian en la cédula to á Agustin, de Avila, alguacil de esta
cantes á Su Magestad el Rey Nuestro córte, habiendo otros ministros de jus
Señor y de la Reyna Nuestra Señora, ticia que lo podian hacer; y lo mismo
son las que tiene declaradas, y las dixo la causa que tuvo para , ponerle preso
con la intencion que tiene dicho.—Y en casa del presidente don Pedro Man
que en cuanto á venenos, no sabe este so, y haberse hecho este confesante
confesante veneno ninguno mas que escribano de la causa, juez el dicho
soliman, ni en todos los dias de su vida señor presidente siendo persona ecle
ha usado de veneno ninguno: y en siástica, y este confesante no siendo
cuanto á los hechizos, dixo que él no escribano hacer los autos como si lo
sabe hechizo ningnno, ni quién le sepa, fuera, y haber començado á escribir la
y que muchos años há oyó decir que causa del dicho Agustin de Avila des
para atraer las voluntades de mugeres pues de haberle preso, y haber exami
eran buenas unas palabras que dicen: nado á los dos testigos que dijeron en
«fulana hiza que te prenda hijo de To ella como á reos, y siendo ambos tes
bias—asi me ames y me quieras como tigos culpados en los delitos que pare
el hijo de Dios á la vírgen María:» de ce haber confesado, como no se pren
las cuales palabras no se acuerda haber dieron y se procedió contra ellos como
usado.—Y que asimismo sabe algunos contra el dicho Avila, pues todo era un
secretos naturales,—que oyó decir que mismo delito y de una misma calidad,
erfumando la camisa de uno con la y que los dichos dos testigos lo habian
reza de otro le aborrecia ó no le que confesado primero como reos y antes
ria bien, de lo cual nunca ha usado.— que el dicho Agustin de Avila, y decla
Que en lo que toca á muertes, no quie re qué causa y motivo tuvo para ha
re le perdone Dios ninguna en que ten berle querido dar veneno, al dicho
ga culpa, execto en la de Francisco de Agustin de Avila, este confesante en
¿ en la cual eni le mataron la cantarilla de agua que ha confesado
or alcagüete- y que la causa porquo siendo cuando lo quiso hacer este con
mataron la h? dio de ¿? ¿? fesante al principio de la causa y pri
dichos señores porque no es para po sion del dicho Avila, y declare todo lo
nerla por escrito. demas que en razon de esta muerte y
Preguntado diga y declare clara y prision se le ha preguntado con aperci
abiertamente de la muerte del dicho bimiento que no lo haciendo se ejecu
Francisco de Xuara, porque no cumple tará el dicho auto de tormento y el di
con lo que tiene dicho ni los dichos se cho marqués de Siete Iglesias dijo, que
ñores lo han entendido, y se le mandó en cuanto á este negocio dice lo que di
diga la verdad con apercibimiento que cho tiene en la confesion que sobre
se ejecutará el auto de tormento-y el ello se le ha tomado,
DON RODRIGO CALDERON. 304
=

Y luego los dichos señores del con tieron á ello y no quisieron ser auto
sejo mandaron que el dicho marqués res de lo que les pedia este confesante,
de Siete Iglesias diga y declare lo que siendo persuadidos é inducidos para lo
asó en la muerte de don Alonso de susodicho, ó si procuró ó intentó este
ojas, page del duque de Lerma y si confesante por algun camino que no se
fué violenta ó natural, y si este confe le aplicasen á S. M. los remedios y me
sante intervino en ella, ó fué autor de dicamentos convenientes para su salud
que se hiciese, ó dió consejo para ello, ó no se le hiciesen las sangrías nece
ó que otras personas intervinieron ó sarias d con quien trató lo susodicho,
fueron autores de ella, y si en alguna ó que dádivas y promesas hizo este con
otra ocasion ó en otro lugar se intentó fesante para que lo hiciesen las tales
antes de lo susodicho el darle la dicha personas: Dijo que es tan buen vasallo
muerte y ayudarle para ella, y en que criado del rey nuestro señor, que si
forma y por cuya mano y medios: dijo ubiera sabido ó entendido cualquiera
que no supo de la dicha muerte palabra cosa de las que se le preguntan, tocára
ni si le querian matar, ni le habian á quien tocára, se lo hubiera dicho al
muerto hasta que el duque de Lerma rey nuestro señor sin respeto humano,
le escribió que era muerto, como se y en lo demas dice lo que dicho tiene
dice en la carta que se le mostró á este en su confesion.
confesante en la confesion que sobre Y se le mandó al dicho marqués por
ello los dichos señores le tomaron que los dichos señores diga y declare la
tiene reconocida, y se remite en esto á verdad en razon de si ha dicho algunas
lo que tiene dicho en la dicha su con palabras desacatadas y sino el respeto
fesion. y reverencia debido del rey nuestro se
Preguntado diga y declare el dicho ñor y de la reina nuestra señora y cua
marqués de Siete Iglesias lo que pasó les son y en que tiempo las ha dicho,
en la muerte de don Eugenio de Oli y porque causa, dijo: que no ha dicho
vera que se le ha preguntado en la con palabra ninguna sin el respecto debido
fesion que de ello se le ha tomado, con al rey nuestro señor, y á la reina nues
¿ que se ejecutará el di tra señora queste en gloria, y que las
cho auto de tormento y el dicho mar que se le imputan son glosadas é inter
qués dijo, que dice lo que dicho tiene pretadas diferentemente de como este
en la dicha confesion que sobre esto se confesante las dijo, y tambien en esto
le ha tomado. dice lo que dicho tiene en su con
Preguntado diga y declare la verdad fesion.
de lo que sabe cerca de la muerte de la Y visto por los dichos señores del
reina nuestra señora doña Margarita deconsejo jueces de la dicha causa lo que
Austria que esté en gloria qué inter ha declarado el dicho marqués, man
daron se le aperciba, diga la verdad de
vino en ella y si fué violenta ó natural,
todo lo que ha pasado en los delitos,
y si este confesante trató y procuró con
alguna persona de violentar y ayudar muertes, hechizos, venenos y lo de
la muerte de S.M., y por que medios, mas que se le ha preguntado con aper
formas y maneras, porque causa y fin, cibimento que no lo haciendo se eje
y en cuya contemplacion, con aperci cutará el dicho auto de tormento, lo
bimiento que no lo diciendo se ejecu cual yo el dicho escribano de cámara
tará el dicho auto de tormento, y el di notifique á él dicho marqués, el cual
cho marqués de Siete Iglesias dijo: que dijo que él ha dicho la verdad en todo
—dice lo que dicho tiene en la confesioná que se remite: y lo firmó y lo dijo de
que sobresto se le ha tomado. -
bajo del juramento que tiene fecho, y
Preguntado si este confesante in con las protestaciones que ha hecho al
tentó con alguna persona ó personas en principio de la confesion que se le to
que se hiciese algunas diligencias é in mó, las cuales siendo necesarias ahora
terpusiesen algunos malos medios para las vuelve á hacer de nuevo: entre ren
ejecutar la muerte de S. M. que se le glones (la verdad ó otro) y testado; la
ha preguntado y si intentaron el efec contra sus, son.—(Siguen tres rúbri
tuarlo y ponerlo en ejecucion, y quie cas).—El marqués de Siete lglesias.
nes fueron las tales personas ó si resis
392 CAUSAS CELEBRES,

Y visto que no quiere decir verdad


Ejecucion del auto. el dicho marqués, mandaron se le dé
otra vuelta á los cordeles del dicho
muslo de la pierna izquierda, y están
Y visto por los dichos señores del dosela dando, dijo que le muestren un
consejo, jueces de la dicha causa que Cristo que tiene á los pies de su cama
el dicho marqués de Siete Iglesias no de cabecera.
quiere decir la verdad, mandaron que Y los dichos señores del consejo
el ministro de la justicia, que se llama mandaron que el dicho marqués diga
Pedro de Soria desnude al dicho mar verdad de los hechizos que se le han
ués, al cual estándolo se le apercibió preguntado y si ha usado de ellos con
iga verdad de lo que se le ha pre tra el rey nuestro señor, donde, cómo
guntado, con apercibimiento que si y cuándo y donde están, y el dicho mar
or no la decir en el tormento que se qués dijo que jura á Dios que Su Mages
e ha de dar muriese, pierna ó brazo se
tad no está hechiçado, ni sabe que lo
le quebrare ó otra lesion ó daño reciéste y es tan buen vasallo de Su Mages
biere, sea por su culpa y cargo, y no tad que si lo supiera lo declarára en
de sus mercedes, lo cual yo el escriba cosa tan importante al mundo.
no de cámara notifiqué al dicho mar Y visto por los dichos señores, man
º una y dos y tres veces, de que dáron se la de otra vuelta á los corde
oy fée, el dicho marqués estando les del muslo de la pierna derecha, y
desnudo, dijo que no tiene mas que estándosela dando dijo: que no tiene
decir que lo que ha dicho y declarado. que decir mas, y aunque fuera contra
Y luego los dichos señores manda el Espíritu Santo dijiera la verdad.
ron asentar al dicho marqués desnudo Y visto por los dichos señores man
en cueros y en el potro y estandolo, el dáron dar otra vuelta á los cordeles
dicho verdugo le ató y ligó el un brazo del muslo de la pierna izquierda, y se
con el otro, y le ató un cordel á ellos, le apercibió al dicho marqués diga la
y habiéndole atado se le mando dar verdad, con apercibimiento que si pier
una vuelta á los cordeles con que se le na ó brazo se le quebrare ó muriere en
han atado los brazos; y le fué dada, y el tormento, ó otra lesion le viniere,
el dicho marqués dijo: «sea por amor sea por su culpa y cargo, y el dicho
de Dios.» marqués dijo que dize lo que dicho
Y luego se le dió otra vuelta á los tiene.
dichos cordeles y le fué dado á am Y luego los dichos señores mandá
bos brazos y el dicho marqués dijo: ron que el dicho marqués diga la ver
«¡ay Dios! sed muy justo que mas me dad de la causa que tuvo para hacer
rezco;» y luego se le dió otra vuelta á matar al dicho Francisco Juara y que
los dichos, cordeles y dijo le martiri causa hubo para hacer proceso contra
zan sin culpa. este confesante y el dicho Francisco de
Y luego se le dió otra vuelta á los Juara en el consejo de la general Inqui
cordeles con que le están ligados y ata sicion, y sobre que se hizo el dicho pro
dos ambos brazos y el dicho marqués ceso en el dicho consejo contra el dicho
dió voces llamando á Dios Nuestro Se - Juara, y este confesante dijo que nunca
ñor que tuviese, misericordia dél. vió el dicho proceso.
Y luego los dichos señores del con Y luego los dichos señores mandá
sejo mandaron que se le aten los cor ron que al dicho marqués se le dé otra
deles al muslo de la pierna izquierda y vuelta á los cordeles y se le mandó diga
se le dé una vuelta á ellos y estándose verdad de lo que se le ha preguntado
la dando dijo, que no tiene culpa sino en razon de la muerte de la reina nues
es en la muerte de Francisco de Juara tra señora y la del alguacil Agustin de
en todo cuanto se le ha preguntado. Avila, y las demas que se le han pre
Y , los dichos señores del consejo guntado, y el dicho marqués dijo que
mandaron que el dicho marqués decla dice lo que dicho tiene.
re la causa de la muerte del dicho Fran Y luego se le dió otra vuelta á los
cisco Juara, y dijo que dize lo que di cordeles del muslo de la pierna izquier
cho tiene. da, y se le apercibió diga la verdad de
DON RODRIG0 CALDERON. 393

lo que se le ha preguntado, y el mar Y luego los dichos señores manda


qués dijo, que muere sin culpa. ron echar otro jarrillo de agua al dicho
Y luego los dichos señores del con marqués, y le fué echado, y se le aper
sejo mandaron desligar al dicho mar cibió diga la verdad, el cual dijo que ya
qués los cordeles de piernas y brazos la hubiera dicho si lo supiera. Y luego
que sea echado en el potro y se le se le mandó dar otra vuelta á los gar
# y aten los cordeles á las dichasrotes de la espinilla, de la pierna dere
piernas y brazos, y se le apercibió diga cha y estándosela dando, pidió miseri
verdad delo que se le ha preguntado, cordia á Dios, y luego se le mandó echar
asi de lo que ha pasado en razon de la otro cuartillo de agua y se le aperci
muerte de la reina nuestra señora, y bió, diga la verdad, el cual dijo que di
hechizos que se le han preguntado, y ce lo que dicho tiene.
de las causas y delitos porque pidió la Y en este estado, los dichos seño
cédula real que se le ha preguntado, y res mandaron cesar en el dicho tor
de la causa que huvo para la muerte mento por ahora, protestando de rei
ue ha hecho de Francisco de Juara, y terarle siempre que convenga, y que
¿ lo que hubo en razon de la causa y el dicho marqués sea quitado y desli
muerte del alguacil Avila, y en la de gado de los garrotes y cordeles que le
don Alfonso de Rojas y don Eugenio de están puestos, y quitar del potro; y
Olivera, con apercibimiento que no lo asi se hizo, y fué quitado y desligado,
declarando se proseguirá el dicho tor y se llevó á curar á su cama, y el di
mento, y la misma declaracion haga en cho marqués no firmó, porque dijo no
razon de los cómplices que hubo para poder, y los dichos señores lo rubrica
cometer los dichos delictos y muertes, ron y señalaron, y el dicho marqués
y por cuya autoridad y respeto se hi dijo ser de la edad que antes tiene de
cieron, y cometieron: y el dicho mar— clarado. (Siguen tres rúbricas.) Ante
qués dijo, que no tiene que decir, y mí,-LÁzARo pE Ios.
questo lo padece por otros pecados y Despues de lo susodicho, en la di
que se cumpla la misericordia de Dios, cha Audiencia de Madrid á nueve dias
«¿y es cierto que estais en el cielo vos: del mes de enero del dicho año de
la reina doña Margarita y no me ayu seiscientos veinte á hora de las once
dais?» de la mañana los dichos señores del
Y visto por los dichos señores, consejo, jueces de las causas del mar
mandaron que se le vuelva á hacer qués de Siete Iglesias, mandaron se
el mismo apercibimiento y habiéndose lea al dicho marqués la declaracion y
le hecho al dicho marqués dijo que si no declaraciones que hizo ante sus mer
es en la muerte de ¿ otra culpa cedes el martes pasado siete deste
ninguna en todas las demas cosas que mes, asi antes que se le diese tormen
se le han preguntado no tiene y que to como estando en él para que se ra
quisiera tener mas culpas para confe tifique en ellas, y habiéndose leido am
sarlas, y lo mismo saber quién las tiene bas declaraciones de verbo ad verbum
para decirlo y declararlo. y por él oidas y entendidas, debajo del
Y luego los dichos señores manda juramento que antes tiene fecho, y
ron se dé una vuelta al dicho marqués aciéndole ahora como lo hizo en forma
al garrote del cordel de la pierna de de derecho:—Dijo, que lo que está di
recha, y se le dió y apercibió diga la cho en las dichas declaraciones que se
verdad, el cual dijo que le matan sin le han leido, asi en la que hizo antes
culpa. de darle tormento estando el potro
Y luego los dichos señores manda dentro en su aposento, como la que
ron echar al dicho marqués un cuartillo hizo en el tormento, es la verdad y en
de agua y ponerle la toca, y se le puso, ello se afirma y ratifica, afirmó y rati
y hecho se le apercibió diga la verdad. ficó, y si es necesario, lo dice ahora
Y luego los dichos señores manda de nuevo, y es la verdad para el jura
ron dar otra vuelta al otro garrote de mento que hizo y no lo firmó porque
la pierna izquierda y se le apercibió dijo no poder firmar con la mano por
la verdad, y dijo que ya la tiene el tormento que se le dió; y aunque
dicha, se llegó con la pluma á que procurase
50
394 CAUSAS CELEBRES.

firmar, probó hacerlo, y segun di cuya causa se le hicieron doscientos


go, tornó á decir que no podrá fir cuarenta y cuatro cargos.
mar de ninguna manera, y los suso Aun para esta defensa se procedió
dichos señores lo rubricaron. — Ante con limitacion, y no se permitió á don
mí,—LázARo DE Rios.—(Siguen tres rú Rodrigo Calderon el hablar con sus de
bricas). fensores sino delante de testigos, no
habiéndosele comunicado ni dicho el
Rendido don Rodrigo Calderon, es nombre de los testigos de cargo que
tenuado con el tormento del agua, contra él deponian.
viendo que no podia sacarse nada mas Don Francisco Calderon, padre del
de lo que libre y espontáneamente desgraciado ministro, en el momento
habia antes confesado, mandaron los en que lo habia visto en la desgracia,
jueces bajarle del potro y aflojar las habia abandonado su retiro de Valla
cuerdas. dolid, habia venido á la córte y sin ce
Terrible era el espectáculo que sar importunaba á los ministros, veia
presentaba aquel hombre demacrado á los jueces, en union de la marquesa,
con tan largos padecimientos, con su muger de su desgraciado hijo, modelo
luenga barba, y cubierto de sangre que de piedad conyugal, que con sus lágri
la accion de los cordeles habia hecho mas hostigaba al rey pidiendo la gracia
saltar por dos fuentes que tenia por de su marido.
sus enfermedades abiertas en sus bra Quedó algun tiempo como parali
zos. Entonces lleno de compasion uno zado el proceso de Calderon. Su abo
de los jueces, don Diego del Corral, gado defensor, Bartolomé Tripiana, en
con lágrimas en los ojos llegó á enju un estenso alegato, (1) escrito en 20 de
gar con su propio pañuelo la sangre
del infeliz don Rodrigo. (1) Alegato en defensa de don Rodrigo
Dieron cuenta los jueces al rey de Calderon.
la ejecucion del auto del tormento, y
de que se habia cumplido su mandato Muy poderoso Señor: -

con todo el rigor ¿ prevenian las le Bartolomé Tripiana, en nombre de don


yes, pero que no habia dado resultado Rodrigo Calderon, marqués de , Siete Iglesias,
alguno, mas que averiguar lo que el conde de la Oliva, capitan de la guardia ale
don Rodrigo habia declarado en su pri mana de W. A., caballero de la órden de San
mera confesion, manifestándole, que tiago y comendador de Ocaña, afirmándome
en las protestaciones hechas por mi parte en
hecha ya la última y mas poderosa di el pleito criminal, y haciéndolas de nuevo pa
ligencia, no sabian ni entendian por ra este: respondiendo á los cargos que le han
dónde se habia de caminar, porque ya hecho:
habian examinado todos los pasos de la Digo que no ha habido ni ha de haber lu
causa, y no hallaban rastro de deli se gar de hacerse los dichos cargos, ni proceder
contra mi , parte en forma de vista o
to probado mas que el de la muer ¿ por ló general.-Lo otro porque ha
te de Juara, que desde el principio ha iéndose procedido contra mi parte en forma
bla confesado don Rodrigo, consultando de visita en el año de 1607, en que fueron
á Su Magestad, para que dispusiese lo jjueces el conde de Miranda presidente de
Castilla, don Fernando ¿i, presidente
que creyera que debia hacerse. de vuestro consejo de las Indias, el cardenal
Contestó el rey que se hallaba en Javier confesor de V.A. y don Juan Idiaquez
terado, y que se pasase adelante en la residente en vuestre Consejo de Ordenes en
causa hasta ponerla en perfecto estado a dicha visita; mi parte fué dado por libre,
de poderse sentenciar. con imposicion de perpétuo silencio, de que -
Entonces los jueces continuaron el se despachó cédula por V. A.; fué fecha 7 de
curso del proceso, y dieron licencia al julio del dicho año de 1607 y despues W. A.
fué servido de mandar que-e dicho marqués
marqués para que pudiese descargarse mi parte no pudiese ser visitado ni proceder
de los delitos de que se le acusaba, y se contra él por los cargos que se le hacen,
que él habia confesado, tanto en la segun se lo escribió el cardenal duque de
causa criminal como en otra civil sobre Lerma por mandado de V.A. en 29 de octu
malversacion de los caudales, y mal fué bre del año de 1611, y despues el año 1616
servido V.A. de dar su real cédula, en
uso de la autoridad que habia ejercido que mandó que no se pudiese proceder con
como secretario de Estado del rey, en tra mi parte por ningunos cargos ni delitos,
DON RODRIGO CALDERON. 395,
=-= --->

diciembre de 1620, respondia uno por con sólidas razones y fuertes argu
uno á todos los cargos que se le ha ImentOS.
bian hecho, procurando desvanecerlos Nada se averiguaba á pesar de

lo cual fué por las causas que W. A. sabe, y drano, y no por eso han sido visitados, ni al
parte se han referido en la respuesta guno dellos tenido por ministro, ni han esta
¿orlamiacusacion criminal. do prohibidos para recibir, y asi tampoco no
De lo cual resulta que está totalmente lo estuvo el dicho marqués mi parte, hasta
cerrada la puerta para visitar á mi parte y que despues de la visita que se le hizo el
procederse contra él, y asi se ha de declarar, año de 607 que se le mandó de palabra por
protesto que por esta peticion y otros cua el dicho conde Miranda que desde alli ade
esquier autos mi parte no quede perjudicado lante no recibiese sin licencia de W. A.
ni sea visto apartarse de cualquier derecho y De que resulta, que discurriendo por los
exepcion que le competa. - tiempos de que se hacen los, dichos cargos á
o otro porque cuando lo dicho cesara mi parte, se hallará que no ha sido ministro
ue no cesa, en el eslado presente no se pue ni puede haber contra él visita. Porque en el
¿? mover ni intentar pleíto de visita con mi primer tiempo en que sirvió al cardenal du
parte, porque contra él se va siguiendo la cau que de Lerina, claro está que, no fué minis
sa criminal porque está preso, y es tan estre tro, ni menos, en el que sirvió á V.A., hasta
cha prision como V.A. save, sin la comunica que entró en lugar del dicho Alonso de Mu
cion necesaria con las personas que acuden a su riel, y desde entonces hasta el dicho año de
defensa, y cuando la tuviese, todas ellas y 607 en que fué visitado no pasó negocio ni
muchas mas aun no serian suficientes para papel por sus manos, sino solamente el ha
acudir á sola la causa criminal, y por esto ni cer de los pliegos, porque las consultas que
parte yendrá á quedar en el uno y otro pleito venian de los consejos para W. A., las libran
sin defensa, y siéndo el dicho pleito criminal, zas que venian á firmarse de los secretarios
sobre los cargos y cosas que en el se traten es las órdenes que dellas resultaban, y todo
ta mi parte desobligada de responder en este lo que se habia de firmar lo veia y despa
ni tratarle por procurador; y asi es Justo sus chaba el cardenal duque de Lerma á quien
penderle hasta haberse determinado y fene lo enviaba en pliegos cerrados el conde de
cido el criminal, y asi protesto que á mi par Villalonga, y de mano del dicho duque carde
te no corra término hasta tanto que sobre es nal pasaba à la de V.A., ó por su persona, ó
to se declare. en bolsas cerradas por las de otros; y desde
Lo otro, porque en caso que mi parte hu la prision del dicho conde de Villalonga cor
biera de responder á los dichos cargos de jus rió el despacho por mano del dicho don Juan
ticia, se le debe dar facultad para defenderse Idiaquez, a quién iban las consultas,, y de
que no la tiene por no comunicar libremente quien venian con su parecer á manos del di
como no comunica, á sus adbogados ni otras cho cardenal duque y dellas con el suyo á las
personas que dello traten ni mostrar los de W. A., como está dicho, y las órdenes que
a peles necesarios, ni darle tiempo compe resultaban de los pareceres del dicho don
ente para ver los dichos cargos y compro Juan Idiaquez él mismo las embiaba en los
vaciones dellos y responder con deliberacion areceres apuntados de su letra, y conforme
y cono le conviene, que nada de lo dicho ¿ y á lo que V.A. parecia en su resolu
puede hacer en tiempó tan breve, que aun cion, las hacia copiar, y porque el leer tanto
no tiene lugar para responder, á los dichos como era menester hacia daño á la vista del
cargos, y asi hablando como debo todo lo que dicho don Juan Idiaquez, de manera que le
contra mi parte se ha hecho es nullo, y asi iba faltando, mandó V.A. que Juan de Ziriza
lo protesto y lo mismo lo que se hiciere, y Jorge de Tovar repartiesen entre sí los tri
tal se debe declarar. unales, como se hizo y llevasen las consul
Lo otro porque lo que pasa es que mi par tas al dicho don Juan Idiaquez, y escribiesen
te comenzóá servir al, cardenal duque de sus pareceres del dicho don Juan, y ansi, lo
Lerma en vida del rey don Phelipe segundo hicieron, embiando juntamente con ellos las
nuestro Señor, que está en gloria, por el mes minutas de las órdenes que se habian de ha
de abril del año de 1398 y despues á V. A en cer, y todos estos despachos venian en plie
Zaragoza, el de 1599, viniendo V.A. de casar gos cerrados á manos del dicho cardenal du
se, y cuando Miguel de Muriel dejó la ocupa que de Lerma, que los veia, y dando en ello
cion que tenia de servir por Alonso de Muriel su parecer, iban á V.A., y lo mismo hizo al
su hermano entró á hacerlo en ausencia suya gunas veces el secretario Antonio Aróstegui,
mi parte, ¿ muerte del dicho Alonso de en las consultas destado y otras que se le re
Muriel entró en su oficio de los papeles de la ¿ estando en esta forma el despacho
cámara, y en este ministerio sirvieron Fran se mandó al dicho marqués mi parte dejase
cisco de Santoyo el viejo, Sebastian de Sal los papeles y fuese á la embajada de Venecia
toyo, Bartolomé de Santoyo, Juan de Santo y asi los por octubre, de seis y once, y
yo, don Francisco de Santoyo, , y don Juan desde que los dejó hasta que fué preso no
Ruiz Negrete, Juan Ruiz de Velasco, los di tuvo otro oficio en servicio de V. A., sino el
chos Alonso y Miguel de Muriel su hermano de el º en Francia y Flandes, y capi
don Bernabé de Vivanco y don Diego de Me. tan de la guardia alemana, de los cuales
396 CAUSAS CELEBRES. -

== r r

haberse sujetado al marqués de Sie de condicion mas humilde y vulgar.


te Iglesias á cuantas estorsiones é Ninguna prueba habia de los deli
instancias podrian usarse con el reo tos que se le imputaban, fuera de la

nunca ha habido visita ni prohibicion de re Calderon, y el dicho Rodrigo Calderon, su


cibir, ni tratar, ni contratar: de lo cual resul agüelo, sacó carta, ejecutoria de su hidalguía,
ta que en todos los dichos tiempos no fué mi el año de 1510, y fué capitan de infantería en
parte ministro, ni tuvo prohibicíon de recibirla batalla de Villalar, y sirvió al señor empe
por los dichos oficios y ocupaciones que tuvo, rador Cárlos V en las guerras de Alemania
y aunque el dicho conde de Miranda le dije muchos años, y por la dicha ejecutoria, consta
se de palabra que no recibiese nada sin li de su nobleza, y de sus ascendientes de línea
cencia de V.A. escepto cosas de comer y be paterna, por la materna consta asimismo
ber desde el dicho año de 607 que fué visita - de su nobleza, pues, desciende de Pedro de
do, si algunas cosas recibió fué con licencia Aranda, montero del señor rey don Juan el
de V.A. en la cual le prohibió recibir de alli segundo, al cual como caballero de mucha
en adelante ni cosas de beber ni comer, por calidad y importante al servicio del dicho se
que tenia escrúpulo, ni cosas para Portaceli, ñor rey, le escribió una carta en que le man
aunque V, A. declaró que no era su intencion da fuese á hallarse al sitio de Torre de Loba
quitarle las limosnas. Desde esta última ¿" el dicho señor emperador Cárlos V el
rohibicion, que fué el dicho mes de abril dia de su coronacion armó caballeros sobre
¿ el de octubre del año 611 en que se le ser hijos-dalgo de sangre, á Luis de Aranda, y
mandó dejase los papeles, como los dejó, no otros sus hermanos, nietos del dicho Pedro de
se hallará que mi parte recibiese cosa de Aranda, hijos del Pedro de Aranda, su hijo;
ningun género, y desde que dejó los papeles el dicho Luis de Aranda tuvo por su hijo
hasta que fué preso, no ¿ tenido otros ofi Juan de Aranda, , padre de doña María de
cios en servicío de V. A sino los questan re Aranda, madre del dicho marqués, que tuvo
feridos, en que no ha habido ni hay prohibi por hermano á Juan de Aranda, tio del dicho
cion de recibir y contratar libremente: de marqués, que fué caballero y de la órden
todo lo cual resulta no poderse hacer á mi del hábito de Santiago, y por la línea mater
rte los, dichos cargos: y no obsta decir que na de la dicha doña María su madre es de los
en la prohibicion que se ¿á mi parte des Sandelines, familia conocidamente noble en
ues de la visita del año de 607 se le mandó Flandes, y que como tal tiene una noble pree
no recibiese de alli en adelante porque se minencia de que en la capilla de la iglesia
le haria cargo dello, y de lo pasado, porque mayor de Amberes, tiene su entierro en el
si recibió alguna cosa en el tiempo que se lla mejor lugar del lado izquierdo, estando como
Ina prohibido, seria con licencia de V. A. y el está en el derecho el dél ¿? de Orange,
apercibimiento ó aviso que en esto se le hizo los desta familia de los Sandelines siempre
fué solo consinacion que no debe tener efecto an sido católicos, siguiendo la parte y exer
á hechos anteriores ni resucitar dellos tan cito de Vuestra Alteza y señores reyes sus
graves cargos, y porque la dicha prohibicion progenitores. Todo lo cual, demas de ser no
no se ha de entender ni estender al tiempo torio, consta por papeles auténticos, de que
despues que mi parte dejó los papeles, ni res están los mas dellos embargados entre los de
peto de los oficios en que no la hay, y, por mi parte despues de su prision; y por ser esto
que al dejar los dichos papeles hubo el dicho asi, Vuestra Alteza le ha hallado capaz de ha
billete del cardenal duque escripto á mi par cerle merced, como se la ha hecho, de un
te de órden y mandado de V. Á; y despues hábito de Santiago y de la encomienda de
de todo la dicha cédula del año de 16, con lo Ocaña, de dicha órden, y á Francisco Calde
cual en caso que hubiera escedido, no ha lu ron, su padre, de otro hábito y encomienda
gar procederse contra mi parte ni hacérsele demayor de Aragon, asimismo de la dicha órden
visita. Santiago: de que resulta que por derecho
Lo otro porque cuando todo lo dicho cesa natural de sangre siempre ha sido capaz des
ra, sin perjuicio dello y debajo de las protes tas y otras cualesquier honrras, dignídades
taciones, hechas respondiendo á los dichos mercedes, ¿? esto se pudiera evitar la
cargos, digo que lo tocante en el primero no respuesta á lo accidental, á que mira la re
se le puede hacer cargo por ser como es lacion del cargo que es aumento de hacien
general, y en lo que se dice en él, que los da, pues esta crece ó se disminuye por di
¿ del dichó marqués fueron córtos y versos accidentes, y se varía con mucha
imitados, puesto que se refiere al patrimo facilidad, no permaneciendo en un mismo ser,
nio y hacienda, pero para esto mismo, y para y asi no se le puede hacer cargo del dicho au
que no parezca desproporcionado cualquier mento, por ser calidad á que está sujeta y
aumento dél, se advierte, que en calidad la dispuestà la hacienda: y lo cierto es, que el
del dicho marqués es ser cáballero hijodalgo, ¿ comendador, padre del dicho marqués
notorio y de solar conocido, hijo de Francisco y los demas sus ascendientes por línea pater
Calderon, comendador mayor de Aragon, y ¿ matern , siempre tuvieron patrimonio
gentil-hombre de la boca de Vaestra Alteza, acienda para tratarse ilustremente, y con
nieto de Rodrigo Calderon, viznieto de Fran a decencia que convenia á su calidad que es
cisco Calderon, reviznieto de Albaro Hortega la referida; y lo demas que dice este cargo se
DON RODRIG0 CALDERON.
se=

muerte de Francisco Juara, confesada bienes, la humillacion en que se veia


por él mismo. Dos años de estrechísi el que tan alto se habia visto, el tor
ma prision, la confiscacion de todos sus mento que habia sufrido cual un vil

reduce á dos cosas: la una, que habiendo en ban al dicho marques por que los mismos
trado mi parte á servir á Vuestra Alteza con oficiales de los secretarios que los envia
¿ patrimonio, y se halla con mucha ban, los llevaban al retrete y los daban al
acienda y rentas con grandes y honrosos primer gentil-hombre ó ayuda de cámara que
oficios. alli estaba, el cual los daba á V.A. ó los ponia
La otra, que procuró mayores acrecenta sobre su mesa, en este caso era imposible
mientos para sí, y consiguió mercedes y ofi tomarlos y abrirlos, y lo mismo era de cami
cios para sí, para su re, hijos, deudos y no en los pliegos que enviaban los ministros
amigos suyos, y ambas tienen satisfaccion, que caminaban con V. A , porque en ello se
es que entró á servir á Vuestra Alteza el guardaba la misma forma, y si los dichos
año de 1599, con mucha cantidad de hacien pliegos venian estando ausente W. A., los
da que tenia de patrimonio y rentas proce traian los mozos del correo mayor, al secre
didas dél, y con la dote de la marquesa su tario de cámara y alli los recibia por el porte
muger, y las mercedes que Vuestrà Alteza un oficial del secretario, y daba certificacion,
ha sido servido de hacerle, se fué aumentan y él mismo ú otro oficial los subia al retrete, y
do, de suerte, que si se ajustan las deudas álli se los tomaba el dicho marqués, ó la per
con que mi parte se halló al tiempo de su sona á cuyo cargo estaba solo para ponerlos
prisión, y el patrimonio que tiene suyo y dote en la mesa de W. A. -

de la dicha marquesa, mercedes que ha re Cuanto á lo que se dice que mi parte de


cibido de Vuestra Alteza y lo ¿ dellas ha tenia los correos, de mas de ser cargo, gene
¿ es muy poca la cantidad que se le ral, lo cierto es que si detuvo algunos fué por
alló respeto del largo tiempo en que se ha órden de v A. y la misma guardó el que fué
adquirido, contándose tambien las cosas con secretario del cardenal duque de Lerma des
tenidas en la confesion de mi parte, recebidas pues que el dicho marqués dejó los papeles,
por él en tiempo hábil y sin prohibicion como y seria por convenir al servicio de V.A. por
está dicho. que en palacio se tiene noticia de los secreta
A la segunda que es cosa natural procurar rios que despachaban, y ellos mismos no lo
y desear cada uno sus acrecentamientos, de podian saber, y asi sucedia despachar dos
sus padres, hijos y deudos y amigos, que to correos á una misma parte por dos diferentes
dos vienen á ser propios y a ser una la razon secretarios y quedarse el correo mayor con
de desearlos, y el pretender la embajada de el provecho del uno, y por saber esto V. A.
Roma y otros cargos superiores no contiene ordenó que se hiciera dicho.
especie de delito y los oficios y honras de que Lo otro porque en lo que toca , al cargo
V. A. hizo merced á mi parte, era fundamen segundo de los papeles que se dice haber de
to bastante para edificar sobre él estas pre tenido mi parte y guardado en su poder con
tensiones y esperanzas, sin que pudiesen pa tra el órden y mandato de W. A. que mandó
recer desproporcionadas á sus méritos, y no los entregase al duque de Lerma, lo que pasa
es nuevo en la suprema grandeza de los re es lo contenido en la confesion de mi parte:
yes, ¿? engrandecer á quien les sirve que cumpliendo con el dicho mandato entre
desde muy ejos, y las historias están llenas gó todos los papeles de que tomó fin y -quito
de ejemplares que quitan y facilitan lo que en la forma que el dicho cargo refiere y los que
parece novedad, que es que el dicho marqués se hallaron en su poder son papeles diferen
se quisiese aumentar y acrecentar de honras tes, que de diferentes personas y partes los
y dígnidades, y cuando en órden á ellas hi procuró haber el dicho marqués mi parte solo
ciese V.A. algunos servicios, siendo con su por curiosidad y asi se los dieron Bernardino
licencia y permision, no solo no es delito, pe Gonzalez ¿do del patriarca don Pedro
ro siendo los dichos servicios nuevos y es Alonso, y Juan de Amesquita de los papeles
traordinarios son dignos de otras tales mer del conde de Miranda y de los del conde de
cedes. Villalonga y esta ¿¿ los mismos papeles
Y en lo que se dice que el dicho marqués se echa de ver y entiende, porque muchas de
llevaba recados del ¿ duque á los mi las consultas son de cosas resueltas por V.A.,
nistros en negocios de visita, es cargo gene y ejecutadas de muchos años atras, y otras son
ral y que no obliga á satisfaccion, de mas que de diferentes tiempos en que mi parte no tu
esto no era delito en el dicho marqués por vo á su cargo los papeles:
tener obligacion de obedecer y cumplir las Otros son memoriales é instrucciones de
órdenes del dicho cardenal como lo tiene ale las casas reales, y estas no entraban ni podían
gado en el pleito criminal: y el decir que ha entrar en poder de mi parte por papeles de
cia á los pretendientes que hiciesen depósi la camara, en la cual solo hay memóriales que
tos, no es cierto ni se le probará con ver se dan para remitir y las estampas de firma
dad: y en lo que se le imputa que abria los sin estar á su cargo otros papeles sino el ha
pliegos de W. A., de mas de ser cargo cer de pliegos que W. A., embia á sus minis
general, lo que pasa es que si los pliegos tros: y en los que se hallaron hay consultas
venian estando aqui V. A. no se entrega diferentes, y otras cosas del señor rey don
398 CAUSAS CELEBRES
=:º

criminal, el alejamiento en que le te aquella junta, lo hizo en la forma si


nian de su esposa, de sus hijos y de guiente.
todos sus parientes, todo habia hecho «Señor: dos años ha que por órden
concebir á los jueces sentimientos de de V, M. las personas que se hallan aqui
compasion y de misericordia. presentes han procedido con toda legal
Mientras que se iba dando largas rectitud contra la persona del marqués
y dilaciones al proceso de don Rodrigo, de Siete Iglesias sin haber hallado en
el duque de Lerma, del modo que en su ella mas de lo que en la primera au
situacion podia trabajaba en su favor. diencia se le hizo relacion á V. M.
Se hallaba alejado de los negocios y del Hoy está concluido enteramente, y sus
mando, aunque en correspondencia di tanciado este proceso sin quedar por
recta con el rey. Pasaba el anciano du hacer la mas mínima diligencia, habien
que de Lerma el invierno en Valladolid do pasado el marqués por todas las ins
edificando con su devocion á los religio tancias y estorsiones que en un hom
sos de San Diego y de San Pablo, á cu bre el mas humilde y desamparado de
ya º iba por un pasadizo que tenia favor humano se pudieran arbitrar y
desde su palacio. Algunas veces iban á tambien conforme nos lo dejaron infor
visitarle desde la córte sus hijos. mado las leyes, las cuales hemos segui
Al mismo tiempo el padre de don do sin apartarnos un punto de ellas, y
Rodrigo y su muger procuraban activar todo cuanto se le ha podido averiguar
las causas de su hijo y esposo, pendien en todas las circunstancias de esta
tes hacia mas de dos años. Habia ya causa, y esto lo ha confesado él mismo,
hecho la alegacion á su favor el licen es haber mandado matar á Francisco
ciado Tripiana el 20 de diciembre como Juara y otras menudencias que discul
hemos dicho. Enternecian al rey las ca pan papeles y que no son de calidad
nas respetables del padre de don Rodri de su porte.
go, las lágrimas de su afligida esposa é » En esta causa se han alegado todas
hijos y la gran necesidad y miseria en las que se le calumniaban con razones
que se hallaba. Resuelto á poner un y congruencias, todas muy poderosas
término á tanta desgracia, hizo llamar y esenciales para su descargo. En la
el 1.º de febrero siguiente nuevamen primera y mas esencial dice que no la
te á su presencia á los jueces de la jun hizo ni se le ha podido probar: en la
ta, y teniéndolos delante de sí y mos segunda que le forzaron las obligacio
trándoles que deseaba ver el término tes de reputacion para mandar matar á
de aquella delicada causa, sin que por este hombre, de las cuales los mas ajus.
ello padeciese la justicia, don Diego, tados no se pueden contener, en lo que
del Corral, á quien tocaba hablar en es fácil encontrar disculpa para todo
esto. Señor, ha padecido no por esta
muerte que luego confesó sino por lo
Felipe padre de W. A. que no tocan al despa que no cometió y se mintió de él, una
cho de la cámara.
Otros eran papeles del duque de Lerma, larga y estrechísima , prision de dos
cartas y respuestas suyas y cartas del prínci años, la confiscacion de tantos bienes
pe Francisco Borja y otras cosas tocantes al como adquirió consiguientes por tan
mismo duque, y muchos dellos hubo mi parte tos trabajos y desvelos en tan largo
de fray Gaspar de Córdoba, confesor de V.A.
y los demas se los entrego el dicho duque pa despacho y ministerio y negocios dis
ra que los viese, y los concertase, y le tribuidos en servicio de V. M. para au
hiciese relacion dellos, de manera que no es mento de esta monarquía en la dispo
culpa de mi parte el habellos detenido y guar sicion y dispensacion de , oficios sin
¿ y en mucho peor estado estuvieran sino menoscabo ni detrimento de su honra,
los guardara, por no hay parte diputada por
V. A. para los tales papeles ni en ninguno siendo el suyo uno de los mayores lu
otro pudieran estar mas bien acondicionados gares de nuestro siglo; en haberle qui
que en poder de mi parte, y por ser, como tado la compañía de su muger: en todos
este es, cargo general, no obliga á mi parte á tiempos era de sentimiento notable y
mas respuesta ni se le debe hacer el dicho no era recompensable con cosa de
cargo.....» -

mundo; su dolor por la separacion de


Sigue el abogado defensor rebatiendo los sus
cargos en número de doscientos cuarenta hijos é hijas tales, los cuales tene
Cuatro. (Lafuente,) mos en lugar de nuestro corazon y de
DON RODRIGO CALDERON, 399
-

nuestros ojos; pues si en el espacio de su voluntad ó lo que fuere servido, que


todo este negocio ha vivido sin ellos es lo último que queda que hacer.»
¿á que martirio es comparable esta Habiendo hecho relacion al rey en
falta? Ultimamente en haberle puesto lo tocante al proceso del marqués, cuya
en un potro que por algunos estatutos defensa se habia oido antes en la junta,
y ordenanzas de sus oficios y dignida presentada por el licenciado Bartolomé
des no podia ser puesto en él, donde Tripiana, y viendo ya el rey cuán rec
se le hizo salir la sangre de las venas; tamente y con cuán estricto rigor se
el descaecimiento de haberlo derriba habia procedido contra él, viendo cum
do de su fortuna en la que se podia afir plida su voluntad, trató de perdonarle,
mar y asegurar, como lo han hecho restituirle sus oficios y sus haciendas,
otras casas que de menos y mas leves y devolver á la compañía de su mu
rincipios y elementos tienen hoy gran ger é hijos, aquel esposo y aquel padre
ugar en España y en otras provincias, que por espacio de dos años se habia
donde podia llevar adelante la espe visto separado de ellos. Mas ay! he
ranza de mas lucidos y dichosos suce mos visto la indolencia de Felipe III;
sos, que el suyo. ¿Por ventura, señor, sus benignas intenciones eran diaria y
todos estos trabajos han caido sobre contínuamente combatidas por el im
el marqués por la muerte de un hom placable odio del conde de Olivares,
bre ordinario? No, que esto luego que que habia logrado apoderarse entera
fué preguntado, lo confesó: ¿pues por mente del poder del príncipe de Astu
que ha venido sobre él, sobre su casa rias, y con el que empezaba á contem
y sobre su honra tanto tropel de des porizar el mismo duque de Uceda, que
dichas? ¿Por lo que se le apremió, lo ha veia que el rey Felipe III habia que
bia cometido? ¿Hásele averiguado esto? dado sumamente, quebrantado en su
No; pues por lo que no cooperó ha pa salud, desde su última enfermedad en
decido tanto, á esta inocencia castiga la villa de Casarrubios del Monte.
da tiene que perdonársela un hecho Veinte y cuatro dias habian trans
º habiéndole confesado estaba libre currido desde que la Junta encargada
e padecer tantos y tan rigorosos tor de la causa de don Rodrigo habia in
mentos, antes bien un moderado y li formado verbalmente al rey, y dirigido
gero castigo. unos dias despues su ¿bie consul
Viniendo á esto, señor, de las razo ta por escrito, cuando la terrible en
nes que hay para absolverlo, cada dia fermedad que habia en el año anterior
perdona Vuestra Magestad y sus mi puesto á Felipe III al borde del sepul
nistros á «un hombre ordinario. Mu cro, se reprodujo el 24 de febrero.
chas ¿ en su favor equivalentes que Una fiebre ardiente, contínuos per
le justifican de volver por su reputa vigilios, una profunda melancolía, re
cion y su honra. A mucho obliga la velaron al rey su próximo fin. En vano
restauracion del precio y decoro cuan hace de nuevo traer á su cama real el
do bajos hombres le pretenden estra cuerpo santo del labrador Isidro, y la
gar, y en tal caso todas las leyes se vírgen de Atocha: en vano oran por su
encojen y abrazan señor, por la de sus salud en todos los templos de sus vas
oficios y dignidades (esto infalible), no tos dominios: habia llegado su última
puede morir accidentalmente ni con hora. En vano quiere el rey aunque
1gnominia. moribundo, usar del poder supremo
De este parecer son todos los de la que se escapa de sus desfallecidas ma
jurisprudencia y á quien seguirán to nos, y llamar al cardenal duque de
dos los de la Junta. Vuestra Magestad Lerma.
es juez árbitro y dueño universal de En torno de su lecho mortuorio se
las leyes, el que las puede hacer y de agitaban los cortesanos disputándose
rogar: esto es lo que hasta ahora hay la herencia de la privanza. -

acerca de las causas de don Rodrigo El conde de Olivares, anticipando


Calderon, marqués de Siete Iglesias, el reinado del príncipe de Asturias, le
habiendo cumplido justificadamente arranca una órden para evitar que el
con lo que Vuestra Magestad nos ha duque de Lerma acudiendo al llama
mandado, con que podria hacer en esto miento de su rey, venga á cerrar los
00 CAUSAS CELEBRES.
=e

ojos de su soberano y de su amigo. El l Muerto Felipe III se retiró el rey al


presidente del Consejo Real en vano monasterio de San Gerónimo interin
hace presente que aquella es una usur se hacian las exéquias reales y se dis
pacion del poder real, cede por lison ponia todo para hacer su entrada como
jear al nuevo poder que se levanta en nuevo rey en Madrid.
el horizonte, y se envia al alcalde de El conde de Olivares fué sirviéndo
córte, don Antonio de Cabrera, que le alli como su gentil-hombre de cá
bruscamente sale á buscar al cardenal mara. Alli se ¿ en ofrecer sufra
duque de Lerma, lo alcanza en Villa ¿ por el alma de su padre. A los tres
castin, y lo hace volver sin considera ias, predicó el padre Gerónimo Flo
cion ni respeto alguno á Valladolid. rencia, jesuita, un sermon al nuevo rey,
¿? de ellos, si aquel monarca aun y entre otras cosas que dijo con el
que débil, hubiese salido de su enfer talento, sagacidad y elocuencia que le
medad, como en el año anterior en Ca eran peculiares tocó el punto de que
sarrubios del Monte! tambien pecaban gravemente los prín
Con razon pudo el conde de Oliva cipes en no premiar como reyes los mé
res, al ver la agonía del rey, decir al ritos y servicios de sus vasallos.
duque de Uceda: El padre Florencio hemos visto que
—A esta hora es todo mio. era uno de los que habian en el anterior
—¿Todo? le respondió asombrado el reinado conspirado contra el duque
ministro duque de Uceda. Lerma y Calderon, y que era de la par
—Todo, respondió el de Olivares, cialidad del conde de Olivares. La alu
sin faltar nada. sion á éste no podia ser mas directa.
A las nueve de la mañana del 31 de Felipe IV la entendió.
de marzo de 1621, murió Felipe III. En aquel dia estando comiendo de
Cuando el fúnebre tañido de las lante de la córte y ya mas consolado el
campanas de la capital anunciaron la rey, porque los príncipes herederos se
muerte de Felipe III, el monarca de consuelan harto pronto, dijo:—Obedez
dos mundos, cuando su lúgubre sonido camos al padre Florencia y no nos ha
penetró en la apartada y solitaria es gamos sordos á su doctrina, cubrios,
tancia en que hacia mas de dos años se duque de Olivares.
hallaba don Rodrigo Calderon, cuando Asi fué grande don Gaspar de Guz
supo este el motivo, cuentan que es man, caro iban á pagarle los ministros
clamó con el mayor dolor: el rey es de Felipe III el haberle hecho aguardar
muerto, yo soy muerto tambien. Cono por tanto tiempo la codiciada gran
cia harto bien el marqués de Siete deza.
Iglesias lo que debia esperar del favo A pesar de lo que acababa de pre
rito del nuevo monarca. Aquel favorito senciar en San Gerónimo, todavía llega
habia sido la piedra donde se habia es ba en sus ilusiones el duque de Uceda á
trellado su poder. creer que podría mantenerse en el mi
Cuando el duque de Lerma habia nisterio con Felipe IV; empero á muy
arreglado á su gusto el cuarto del prín pocos dias, habiendo ido á ver al rey
cipe de Asturias, ya entonces rey, don para entregarle las bolsas y papeles en
Rodrigo habia sido la influencia para que estaba el testamento de su padre,
colocarle en el; él mismo habia ido á le dijo el jóven monarca grave y seve
llevarle a su casa la noticia, y con ramente.—Dejad ahí los papeles y en
gratularse con él, y don Gaspar de Guz tregadlos al duque de Olivares.
man conde de Olivares iba á ser el mi Besó la mano del rey y se retiró á
nistro universal del nuevo rey Feli llorar con aquel desengaño el justo
pe IV. El conde de Olivares no olvidó castigo de su conducta con su anciano
nunca que la codiciada grandeza de padre, por haber sido con mengua y
España, que ahora iba ya á obtener oprobio de la naturaleza su mas pérfido
ademas ser el dispensador de todas rival y enemigo.
as gracias de la monarquía, le habia Mientras el rev se hallaba retirado
sido negada muchos años antes por el en el monasterio de San Gerónimo cum
duque de Lerma yy por don Rodrigo
Calderon, C pliendo con la régia etiqueta, despues
de haber mudado su ministro, pretestó
DON RODRIGO CALDERON. 404

== EE ==

quererenterarse por sí mismo de lo que I y tenido que retirarse á sus tierras de


habia en la causa del marqués de Siete Lerma.
Iglesias aun cuando habia oido hablar El ministro decano, don Francis
mucho de ella cuando era príncipe, co Contreras, dió cuenta muy porme
ahora como rey deseaba ver si habia nor del estado de la causa; de todas
habido en esta causa algun respeto hu sus diferencias, y de cuanto en ella en
mano, ó si los jneces se habian dejado virtud de las órdenes del rey Feli
llevar de los halagos de los validos pa pe III se habia obrado; los pasos, las
sados, como sin duda se lo habia hecho averiguaciones, los testigos y su exá
entender su favorito el conde-duque de men; las diligencias y el celo que en
Olivares. Queria ver si habian cedido de ella habian desplegado; la entereza y
su rectitud y entereza de justificacion: rectitud de ministros y jueces, y que
queria ver, por último, si habia algo nada se habia hallado en la causa mas
que hacer mas en aquella causa, y com ¿ lo que el mismo don Rodrigo habia
peler á los jueces á que lo hiciesen llanamente confesado. Hizo ver lo mu
Para esto mandó que los jueces es cho que habia padecido por lo que no
peciales que componian la junta fuesen cometió, siendo cosa ilícita hablar mas
á San Gerónimo; y en el dia señalado, en ello; refirió las resoluciones que á
á las tres de la tarde entraron en la boca se habian tomado en presencia
antecamara del rey. del difunto rey Felipe III, refiriéndolas
Gran rumor movió en la córte aque circunstanciada y detalladamente, y sin
lla llamada de los jueces al palacio del omitir nada.
rey Felipe IV, precisamente en aque El rey Felipe IV despues de haberle
llos primeros momentos en que se su oido, y de haber hablado aparte unos
ponia deber estar entregado al dolor, pocos instantes , con don Baltasar de
y en que todavía no habia hecho su en Zúñiga, les mandó que apurasen y dis
trada pública en Madrid como nuevo cerniesen de nuevo el caso, y lo pusie
T10Ina"Ca. sen en mayor estremo.
Todos creyeron que era llegado el Respondieron entonces los jueces,
momento en que iba á tener un funesto que si el mismo Dios se lo hubiese en
desenlace la causa de don Rodrigo, que comendado á boca no pudieron haber
por espacio de dos años habia tenido hecho mas en él de lo que habian hecho,
tantas peripecias, y se habia arrastrado pues tanto habian deseado servir al rey
tan lentamente. Creian, y con razon, difunto como ahora deseaban con todas
que iban á verse de esta vez entera sus fuerzas servir á S. M., advirtiendo
mente desvanecidas las esperanzas que ni en su cuidado han dejado nada
que habia concebido ya el mismo don por hacer, ni en su obligacion que sos
Rodrigo Calderon, ya su desventurada pechar, ni la novedad de los tiempos
familia, ya sus amigos, ya otros muchos podrian en ellos mas que los pasados,
á quien el transcurso de un periodo tan asegurando que en lo tocante á esta
largo de desgracias habia hecho amor eausa todos habian hecho el deber; que
tiguar el odio. la causa estaba por votar, y que no ha
Entraron, pues los jueces en la an biendo sacado de ella lo que sospechaba
tecamara régia, y tomaron asiento enS.M. el rey Felipe III, nada habia ga—
unos bancos cubiertos de bayetas ne nado la dilacion, y aun habia manifes
ras por hallarse entonces la córte tado sus deseos é intencion de sobre
e luto. Salió el rey, fuéronse to seer en ella, lo cual se hubiera verifi
dos los cortesanos, y únicamente man cado si la muerte no hubiera atajado
dó quedarse con él á don Baltasar de su preciosa vida: que ellos ya nada te
Zúñiga, para que fuese su consejero en nian mas que hacer en la causa que
esta ocasion. cumplir con lo que S. M. quisiese para
Nuestros lectores saben que don concluirla.
Baltasar de Zúñiga era el tio del con El rey los despidió, manifestándo
de-duque de Olivares, era el que habia les que les comunicaria su resolucion.
entrado á reemplazar como ayo del No se ocultaba á aquellos hombres
príncipe al duque de Lerma, cuando que la causa iba á entrar en una nueva
éste habia sido separado del ministerio faz; que el ánimo del rey se hallaba pre
5
402 , CAUSAS CELEBRES.
- === e

venido; y que iba á mirar con muy dis Uceda para derribar al anciano carde
tintos ojos de gº habia hecho su pa nal duque de Lerma. Comenzó su go
dre la causa y la suerte de don Ro bierno por separar de los empleos, ha
drigo Calderon. cer salir de la córte y castigar en el
Terminado el novenario el nuevo destierro ó la prision, á todos los per
rey hizo su entrada pública en Madrid sonages mas favorecidos del duque de
trasladándose desde el monasterio de Uceda.
San Gerónimo al palacio de donde pocos Una de sus primeras víctimas fué
dias antes habia salido para el Escorial el gran duque de Osuna, don Pedro
el cadáver de su padre. Tellez Giron, virey que habia sido de
Comenzaba un nuevo reinado.—La Sicilia y Nápoles, hombre que habia
sucesion de los reyes de España en el sido calumniado suponiendo querer
siglo diez y seis se señalaba por la su apoderarse de aquel reino por sus ene
cesion de los validos. migos, que no le perdonaban el haber
Felipe IV, jóven de diez y seis años, se conciliado el amor de aquel pueblo.
ocupó el trono de las Españas. Esta Sus talentos militares le habian adqui
nacion, que habia llegado al mas alto rido la mas alta consideracion y el re
punto de su gloria en los reinados de nombre de gran duque de Osuna. Las
Cárlos V y Felipe II, ocultaba bajo un ventajas que obtuvo sobre la flota ve
esterior brillante, bajo el manto de neciana (1617) hicieron que el pabellon
púrpura y oro, un cuerpo gastado que español recorriese libremente el Adriá
debilitaba una enfermedad funesta. El tico; empero sus triunfos le suscita
movimiento retrógrado que conduce á ron enemigos. Entró en una cons
los pueblos al embrutecimiento y á la piracion con los descontentos de Ve
miseria, habia comenzado en el reinado necia que fomentaba el marqués de
de Felipe III. En vano Felipe IV iba á Bedmar; pero el consejo de los Diez la
luchar contra el torrente que debia descubrió, castigó severa y ejemplar
arrastrar su desventurado reino. Tenia mente á los conjurados (1618) y salvó
todos los defectos de su padre; ningu la república.
na cualidad propia para el gobierno; Para vengarse esta, puso en planta
indolente, se entregó á los placeres y cuantos medios la sugeria su astuta y
las diversiones dejando la administra tenebrosa política para deshacerse de
cion de los negocios públicos al arbi su terrible enemigo. El duque de Osu
trio del conde de Olivares, otro jóven, na fué depuesto de su gobierno de Ná
ambicioso, sin esperiencia ni talento, poles en 1619 y llamado á Madrid á dar
que debia fomentar en él la inclinacion cuenta de su conducta. Estaba relacio
á una vida sensual y voluptuosa. En nado con el duque de Uceda y perma
breve siguió la córte su ejemplo, y mas neció libre durante su ministerio en
parecia la de un príncipe mahometano Madrid; empero al subir al poder el
del Asia que la de un príncipe cristia duque de Olivares fué preso y conduci
no. El contagio de la corrupcion cun do á la Alameda, y á pesar de que no
dió hasta las aldeas, y los españoles pudo probársele ninguno de los críme
perdieron en poco tiempo aquel carác nes que contra él habia inventado el
ter valeroso y robusto, y aquellas no odio de sus enemigos, murió en la
bles cualidades que los habian distin prision de enfermedad, de disgusto y
guido en todo tiempo de los demas de ira sin que llegase á verse la justi
pueblos del mundo. cia de su causa.
El conde-duque de Olivares, don El inquisidor general, fray Luis de
Gaspar de Guzman, fué el ministro en Aliaga, confesor que habia sido del du
quien reposó el peso de la monarquía que de Lerma y del rey Felipe III, fué
y que continuó con el rey gozando del tambien desterrado á Huete, al con
valimiento que se habia adquirido vento que habia en aquella villa de su
cuando era príncipe de Asturias, con órden, haciéndole salir de Madrid en
tribuyendo á su corrupcion dándole di el término de veinte y cuatro horas.
nero para satisfacer sus gustos, ha El mismo duque de Uceda, privado
biéndose unido en el reinado anterior pocos dias antes de su ministerio, fué
hábilmente al partido del duque de preso el dia 24 de abril por un consejero
DON RODRIGO CALDERON. 403
E= -

de Castilla y un alcalde de córte, encer dºn Gaspar de Guzman, si bien des


rándole sin comunicacion en la torre de pues no habia podido hacerle salir de
Torrejon de Velasco, donde fué á tomar él, murió de pesadumbre al verse tra
le la confesion con cargos el licenciado tado de una manera tan indigna; y es
Garci Perez de Araciel, fiscal del Conse seguro que si la púrpura romana no le
jo Real (13 de agosto), instrumento muy hubiese cubierto, hubiera sido su suer
á propósito, como veremos despues, en te mas terrible y desastrosa.
la causa de que nos estamos ocupando. El sistema del conde-duque de Oli
El duque de Uceda, de quien se habia vares, era hacer ir desapareciendo con
mostrado en el reinado anterior parti la muerte, la prision ó el destierro á
dario para sostenerse en el valimiento todos los que habian sido sus enemi
del príncipe el conde-duque de Oliva gos, aun á aquellos á quienes habia te
res, fué condenado á pagar veinte mil nido que adular en los años anteriores
ducados y á ocho años de destierro á para consolidar su poder.
veinte leguas de la córte, muriendo Debia, pues, de ocupar el primer
mas tarde, en 1624, entre cadenas en lugar en su sistema de venganza don
Alcalá de Henares. Rodrigo Calderon, á quien consideraba
Tambien el duque de Lerma, no como el alma, como el pensamiento del
obstante hallarse investido con la púr anciano duque de Lerma. No podia
pura romana, fué desterrado á Torde conformarse con el dictámen que ha
sillas. Alli fué víctima de una enfer bia elevado el tribunal especial al rey
medad que le llevó á las puertas de la Felipe Ill para que se sobreseyese en
muerte, y solo alcanzó su libertad por el célebre proceso que hacia veinti
la mediacion enérgica del pontífice y ocho meses se estaba siguiendo al mar
del colegio de cardenales. El papa qués de Siete Iglesias, proceso mons
Gregorio XV. reclamó los fueros de la truoso por la reserva con que se toma
púrpura romana, y, como él mismo de ban las declaraciones, por la ocultacion
cia al ilustre proscripto, tomó la defen que se hacia al reo, del nombre de los
sa de su hijo querido cuyas buenas testigos, y por la ilegalidad con que se
obras y oficios tanto habian honrado á le prohibia el tratar y hablar con sus
la silla apostólica. procuradores y defensor.
Si el conde de Olivares se vió pre Se mandó al fiscal que hiciese la
cisado á dar libertad al anciano carde acusacion, y que despues pronunciasen
mal, lo trató de una manera cruel, y á los jueces la sentencia.
pretesto de hacer volver á la corona Queria el conde de Olivares inau
cantidades que el rey Felipe III habia gurar el principio de su poder y del
donado á su favorito, nombró un tri reinado de Felipe IV con un terrible
bunal especial, é hizo que diese el rey espectáculo; queria presentar al pue
un decreto autógrafo en el que se tra blo á aquel á quien habia mirado en el
taba al cardenal de la manera mas apogeo del favor y del poder, en el ca
humillante y vergonzosa que podia dalso; queria arrojar á la ávida curio
tratarse al último de los reos de los sidad del vulgo, deseoso siempre de
crímenes de concusion, en aquellos novedades y espectáculos, la cabeza
tiempos tan frecuente. En aquel de del ministro ante quien por tantos años
creto se decia: Por cuanto entre otras habia tenido que postrarse el pue
cosas depravadas que el cardenal duque blo, los nobles y la grandeza. En vano
de Lerma hizo despachar en su favor la esposa y los hijos del marqués de
con ocasion de su privanza, fue una etc. Siete Iglesias se arrastraban llorando
El cardenal fué condenado á pagar al en las antesalas del ministro y en la
fisco setenta y dos mil ducados anua cámara real pidiendo al rey misericor
les, con mas veinte años de atrasos por dia; en vano la marquesa, á quien lle
las rentas y riquezas adquiridas du gó á cerrarse la entrada en el palacio
rante su ministerio. para no fatigar con sus importunos la
El anciano duque de Lerma, aquel mentos y ruegos el ánimo del rey,
en cuyas manos habia estado por tan ocupado siempre en los placeres y las
tos años el destino de la España, aquel diversiones, seguia por las calles y pla
que habia dado entrada en palacio á zas el coche del rey é imploraba á éste,
0. CAUSAS CELEBRES,
==-c --->

ora á las puertas del Buen Retiro, ora contra don Rodrigo Calderon; y es se
á las de los templos cuando el rey iba guro que de su simple lectura resalta
á Qrar. ra aun para los menos versados en la
El cardenal de Trejo, que desde su ciencia del derecho el odio y el encar
destierro de Burgondo habia escrito al nizamiento con que se perseguia á don
rey y al ministro, recibió la órden de Rodrigo Calderon y el ningun funda
marchar inmediatamente á Roma, bajo mento que tuvieron los jueces para
el pretesto de ser necesaria su presen dictar la tremenda sentencia, que llegó
cia para asistir al cónclave en que de á arrancárseles.
bia elegirse un nuevo sucesor de la
tiara de San Pedro por la muerte del Eactracto de la acusacion fiscal.
papa Paulo V, ocurrida el 16 de febre
ro de 1624. - Comienza el fiscal haciendo una lar
La noticia de la marcha apresurada ga enumeracion de los cargos y em
que se hizo hacer al cardenal de Trejo, pleos que tenia don Rodrigo calde,
acabó de contristar el ánimo de don deteniéndose en esplicar las preemi
Rodrigo Calderon, reputándola como el nencias propias de los marqueses, de
preliminar de la gran desgracia que le los condes, de los capitanes y de los
aguardaba. Activaba cuanto podia el caballeros de la órden militar de San
ministro conde-duque de Olivares la tiago sin omitir el menor de sus títulos,
prosecucion de la causa del desgracia astando muchísimas páginas en estas
do don Rodrigo; hablaba él mismo á los intempestivas digresiones que para na
jueces y estos, menos uno, le sirvieron da venian á ser necesarias para formu
demasiado bien y se hicieron acreedo lar su acusacion. Hace despues una de
res á las recompensas que despues ge tallada descripcion de lo que es una
nerosamente les distribuyó. cárcel, como si todos no supiesen que la
El fiscal Garci Perez de Araciel, el cárcel es una habitacion penosa é in
mismo que dos años antes habia habla comoda.
do á Felipe III, y habia hecho ver la in Diserta larga y pesadamente sobre
culpabilidad de don Rodrigo en los crí la justicia en todas sus divisiones, es
menes de que se le acusaba, sobre todo presando que los dos polos con que se
en la absurda acusacion de complicidad conserva el órden en la república son el
en la muerte de la reina doña Marga premio y el castigo.
rita acaecida de sobreparto, este hom Alegaba para que en el reinado de
bre, variando enteramente de opinion Felipe IV, se castigasen los delitos de
con una crueldad indigna de su minis Don Rodrigo, cuya causa se habia co
terio, formuló una acusacion fiscal, menzado en el reinado de Felipe III, el
vergonzoso monumento del mal gusto ejemplo del rey David que mandó á su
literario de aquella época en el foro, en hijo Salomon que vengarse la alevosía
que hacinando en un escrito de mas de Joab su capitan, cuando pudo ha
de doscientos pliegos una indigesta, berlo hecho él mismo.
pesada y torcida erudicion, copia textos Espresaba que los delitos de los pri
de la Biblia, trozos enteros é inoportu vados y favoritos debian los príncipes
nos de los poetas latinos de la antigüe castigarlos con mas rigor.
dad, leyes enteras sin venir á propósi Terminaba esta prolongada intro
to, del Digesto y de los códigos espa duccion á su demanda fiscal con una
ñoles, y concluye con pedir la pena de grande alabanza de los jueces señala
muerte contra el desventurado don Ro dos por el rey para formar la junta es
drigo Calderon. pecial que entendia en esta causa.
No hubiéramos vacilado un momen Cerca de veinte pliegos ocupa nada
to en trascribir este documento, si no menos este intempestivo prólogo.
fuese de tal naturaleza y estension que Entra despues ya en materia divi
estamos seguros que nuestros lectores diendo su acusacion en tres puntos ó
no hubieran podido continuar su lec capitulos.
tura. Hemos preferido, pues, el hacer El primero es el de la acusacion de
un ligerísimo estracto por el que se ve delito de lesa magestad.
rán todas las culpas que se acumularon Con este motivo se estasia en pon
DON RODRIGO CALDERON. 405

S=

derar esta clase de crímen, hace la his No porque conjeturas sean bastan
toria de él desde los tiempos mas re tes para dar por probado un delito y
motos, escribe aunque sin método un poderse quitar la vida; pero porque es
tratado completo del delito de lesa Ma tas en tal caso pueden llegar siendo
estad. Cita todas las leyes romanas, evidentes á hacer plena probanza; asi
¿ Decretales, las Partidas, y haciendo lo prevenian las leyes, particularmente
una escursion á los reinos estrangeros la primera de homicidios, libro sesto,
habla de cuanto sobre este punto de del cuerpo del derecho en la muerte
terminan sus varias legislaciones. con veneno, en otros, porque el man
Prueba que todo lo que estas legis dar matar á otro es cosa que puede ha
laciones han dispuesto siempre acerca cerse con gran secreto, sin que se es
de la persona del rey, se entiende de plique con accion esterior que dé mo
sus esposas las reinas, debiendo aun tivo á verse y entenderse: y en este
ser mas calificado el delito porque ade caso, claro está que átomos y rastros
mas de reunirse en ellas todas las cir de indicios harian probanza, y los muy
cunstancias de persona real concurren ligeros en otros casos podrian ser evi
las de ser una muger, citando diversos dentes en este, y asi no decia qué con
testos de Aristóteles y otros filósofos jeturas bastaban por ser grave el deli
de la antigüedad que dijeron que era to, sino que por ser tan grave obligaba
mas torpe y grave el matar á una mu á mayor recato y secreto en la ejecu
ger que á un varon. cion, y eso por sí dificultaba la pro—
Hace una cumplida y estensa ala banza.
banza de la reina para venir despues á Sentaba por , base, de que por eso
acusar á don Rodrigo de haber teni debia quedar todo al arbitrio del juez,
do parte en su desgraciada muerte. siendo atribucion de éste el calificar
Manifiesta que este delito era uno las pruebas en cada delito como era
de los atroces y esceptuados. menester. -

Se detiene en manifestar que en los Asentaba, que en los delitos de


delitos esceptuados y graves se requie lesa magestad constituian los indicios
re menos probanza que en los comu prueba plena.
nes; pero que el derecho en ninguna Despues de discurrir larguísima
materia ha dado ciencia cierta para las mente sobre esta materia, venia á
probanzas, ha dejado al arbitrio del querer aplicar su doctrina al caso pre
juez este límite segun su gravedad y sente, para examinar si bastaban los
circunstancias. indicios que él creia resultar contra
Con este motivo entra á recorrer don Rodrigo Calderon, para poder acu
cuanto se ha dispuesto en la tan com sarle de causante de la muerte de la
plicada legislacion española, en la ro reina despues de su parto.
mana y en la canónica, en materia de Decia que bastan los indicios por
testamentos, de contratos, de delitos haber muerto la reina de sobreparto, y
y modo de probarlos, descendiendo á ser el estado de puerperio el mas es
esplicar minuciosamente, como po— puesto por su naturaleza y gravedad á
dria hacerse todos estos puntos en un accidentes mortales. Para esto desde
tratado de derecho. el texto del Evangelio que dice: Mulier
Esplica despues, que las leyes no cum parit tristitiam habet et est in pres
pudieron tampoco dar regla cierta é sura, hasta los aforismos de los médi
individual en cada delito, porque no cos griegos, cita.
¿ prevenir las circunstancias del Alegaba como principal indicio para
echo con que habia de suceder, y de probar que don Rodrigo tuvo parte en
los cuales habia de resultar la proban la muerte de la reina, su grande amis
za; empero dieron reglas por mayor tad con el doctor Mercado, que fué el
ejemplificando casos para que de ellos que la asistió en el sobreparto, en el
se sacase lo que en otros se habia de que hallándose casi buena le acometió
hacer, y asi dijeron, que en los delitos un accidente tan fulminante, que le
de oculta naturaleza en la que no po— atacó á la cabeza, que fué con mayor
dia de otro modo encontrarse la ver violencia y presteza de lo que debiera
dad, bastasen las conjeturas. naturalmente obrar la abundancia de
406 CAUSAS CELEBRES.
=

sangre y mas estando ya sangrada, averiguar de donde habian salido: por


pero las sangrías fueron muy cortas y
que siendo natural que corriesen por
menores que en otras semejantes oca mano de Antonio del Espinar, primer
boticario, no se sabe donde los hizo,
siones, siendo asi que la complexion de
Su Magestad era fuerte, robusta y san
porque no se hicieron en la botica
¿ conocida por tal del doctor Real ni en la de San Lorenzo: porque
ercado y de los médicos. dice el ayudante que asistió á la boti
Aducía las circunstancias que hubo ca, y por cuya mano debieron pasar
en la enfermedad de la reina en que ue no subió hasta seis dias despues
muchos declaran que la comadre se el parto, y que ya entonces los tenia
retiró al segundo dia del parto, lo que puestos S. M.
repugnaba en la materia y exigencia Entraba tambien el fiscal en su afan
de su necesidad y que en cualquier de buscar indicios para comprobar la
persona particular no hubiera sucedi culpabilidad de don Rodrigo en la
do, mucho mas en los reyes que no muerte de la reina, en el prolijo exá
solo se está con ellos cuando se temen men de si dos ayudas que se habian
y amenazan peligros, sino aun cuando echado á S. M., con la una de las cua
tienen la mas remota idea de que pue les obró y con la otra le sobrevino un
dan padecer una ligera indisposicion. accidente, eran remedios contraindi
Sacaba un indicio vehemente con cados y maliciosos.
tra don Rodrigo por la grande amistad Culpaba al doctor Mercado por ha
que tenia con el doctor Mercado, ha ber usado con la reina un remedio nue
ciendo un terrible cargo de que los vo que llamó digital: el que los otros
médicos de cámara Valle, Juan Gomez médicos y el boticario Espinar dijeron
y Herrera faltaron en ocasion tan for que jamás lo habian hecho ni oido.
zosa y obligatoria, cuando en cualquier Sentada la base de la amistad é in
achaque concurrian todos. flu encia de don Rodrigo con el doctor
Manifestaba que si bien habian asis Mercado, referia el fiscal los pasos que
tido otros de los que pudo atropellar en diversas ocasiones habia la, reina
y atropelló Mercado, decian los testi-dado con su esposo, para que separase
os que tuvo con ellos un altercado so del despacho de los negocios á don Ro
re sangrar con mas amplitud á la drigo por su mal proceder.
reina. Que llevada la reina del bien de su
Citaba que los remedios propinados reino, revestida de aquel eficaz celo de
á la reina por el doctor Mercado lejos justicia no podia contenerse de desear
de aliviarla la habian empeorado, que ¿ ni de publicarlo; y asi dijo diversas
con ella habian usado de emplastos de veces que no seria contenta hasta que
peregil, lirio y otras cosas aplicadas á este ladron (estas eran las palabras)
á los pechos, remedio que no habia tirano se ahorcase públicamente, y que
usado nunca en semejantes casos, tan de su hacienda pensaba hacer el monas
to que al ponerse con su aplicacion ins terio de la Encarnacion, que siempre
tantáneamente peor la reina le habiaque tenia que nombrarlo lo hacia di
dicho al mismo Mercado: ¿qué me ha— ciendo aquel vellaco. Que habia dicho
beisEntrando
puesto aqui, que me ha muerto? á una persona que le pidió permitiese
en consideraciones mé saliese á una embajada don Rodrigo
dicas esponia que el peligro mismo de como medio de quitárselo asi de delan
bia de obligar al facultativo á no mu te: que no queria que saliese honrado,
dar los remedios que en otras oca sino castigado: que todo esto llegó á
siones habian aprovechado. Condenaba noticia de don Rodrigo, y habia engen
los emplastos nuevos y estraordinarios drado en él odio y mala voluntad con
que pusieron á los pechos á la reina y tra la reina.
que inmediatamente le reprimieron la Discurria para probar este odio el
leche. fiscal citando varias espresiones que
- Formaba un gran cargo de que los en divereas veces habia dejado esca
emplastos, y quintas esencias que par don Rodrigo por los desaires con
mandó aplicar al pecho de la reina el tínuos que le hacia la reina, deducien
doctor Mercado no se habia podido do de aqui que hallándose perdido don
DON RODRIGO CALlbERON, 407

Rodrigo como único medio de conservar dioso es Dios, y qué cortesano, lo que
su poder y privanza habia apelado á le debo.
procurar la muerte de aquella señora. Encareciendo otro testigo la gran
Alegaba en comprobacion de esto pérdida de tan escelente reina, res
el que jamás la reina queria que se pondió don Rodrigo, que no faltaria
sirviese á su mesa nada que viniese Otra.
de manos de don Rodrigo, que era par Hallándose seis meses despues de
ticularmente el encargado de distribuir la muerte de la reina, en palacio, y al
las truchas de Balsain, repitiendo de ver un caballero al infante don Alonso,
lante de toda la córte: que no queria lamentándose de que hubiera sido
que aquel vellaco entrase ni saliese en a causa de la muerte de su madre, le
cosa suya, porque no la matase como lo dijo don Rodrigo: ande vuestra seño
habia hecho con otros; que de mano de ria que bien está lo hecho.
aquel vellaco no queria nada. En su afan de hallar culpable á don
El fiscal, espresando el principio, Rodrigo en la muerte de la reina, ponia
no siempre cierto, de que la muerte como indicio el haberse encontrado en
debe presumirse causada por enemigo, su poder un retrato de la reina despues
examina los quilates de la enemistad de muerta, acriminando que esto no
que profesaba don Rodrigo á la reina. era por amor sino para aumentar el
Revelaba que dias antes se habia contento de verse libre de ella, y como
visto andar hablando en secreto á don cosa apenas creida de puro deseada,
Rodrigo y al doctor Mercado. asegurándose con la representacion de
Sacaba como un indicio vehemente su traslado muerto, recordando el pe
que de lo que debieron tratar era de ligro á que estuvo espuesto con su
la muerte de la reina, porque cuando vida.
toda la córte se hallaba acongojada y Disertaba con este motivo profusa
llena de duelo, don Rodrigo, con des mente el fiscal y sin venir al caso, so
usada alegría y satisfecho de la posicion bre la tristeza que se debe tener por
en que se hallaba y seguridad que á su los difuntos, sobre las lágrimas verda
parecer habia granjeado, dijo: voto á deras y engañosas, como sucede con los
Dios que riñe Dios mis pendencias. que recibiendo grande herencia lloran
Acusábale el fiscal tambien de va con los ojos y se alegran con el corazon.
rios dichos que en su sentir compro Insistiendo en probar la complici
baban su complicidad en la muerte. dad de don Rodrigo en la muerte de la
Llevando á enterrar el real cuerpo, reina, referia las diversas mercedes
hubo quien ya ofendido de la alegría que habia hecho al doctor Mercado an
de su semblante tan impropia y ofen tes de la enfermedad de la reina y des
sible en º ocasion, ya persuadido pues de ella, habiendo tambien hecho
de ello y de la causa de donde nacia diversas gracias á los hijos del botica
le dijo: buen puerco ha muerto vuestra rio Espinar.
merced, señor don Rodrigo, este con De todos estos indicios deducia el
testó muy alegre; otro me falta. fiscal que don Rodrigo era reo de la
En lo primero, decia el fiscal que muerte de la reina, constituyendo una
confesó su malicia y efecto de ella, y prueba plena tal cual la requiere el de
en lo segundo le procuraba su conser recho, porque si se hubiese de esperar
vacion con tales medios. Entrando en á encontrar dos testigos contestes en la
casa de un señor, puso los ojos en un muerte de una reina, jamás se podria
retrato que habia de la reina entre otros probar este delito.
varios de las personas reales, y dijo: á Bastaba en concepto del fiscal, que
saltadera nos tuvo, pero trocóse la suer en el mismo punto que murió la reina
te y pagónosla. se divulgó, que estando ya casi buena le
Cuando murió la reina, refiere un habian sobrevenido accidentes repen
testigo que le oyó decir: válgame Dios tinos: que se le aplicaron remedios
y qué fiera dó despues de muerta! nuevos y nocivos que no se supo don
Quién la dijera que yo la habia de ver de se hicieron: que la sangraron poco,
desta manera y dar fé de su muerte! contraviniendo á lo que en otros par
- Otras veces decia, que: misericor tos se habia hecho: que faltaron mu
408 CAUSAS CELEBRES.
====

chos médicos de cámara: que Mercado dico porque el hablar á sus abogados
solo dirigió la cura: que ¿ Rodrigo en presencia de otros, no era limitarle
hizo grandes y escandalosas demostra la defensa, pues podia comunicar y
ciones de contento, y que sin haber resolver todo lo que á él perteneciere.
lugar ni tiempo para que la noticia se Si es legítima la defensa en los autos
derivase de unos en otros, se estendió habia de aparecer despues y pública
una aprension y concepto firme y se habia de ser, y asi no importaba que
guro de que don Rodrigo habia inter la supiese la persona á quien le ponian
venido en la muerte de la reina. por testigo, y si fuere injusta no era ra
A este indicio de la pública fama zon dar lugar á ella máxime no habien
le daba el fiscal una fuerza irresis do sido testigo de la comunicacion la
tible, alegando para esto la última parte contraria de don Rodrígo ni al
regunta que por fórmula se pone en fiscal le habian dicho nada, con lo que
a mayor parte de las declaraciones. el juicio en esta parte era igual: sien
Daba por articulada y probada esta le do asi que el autor Farinaccio decia
gítimamente en nuestro caso: porque que el fiscal podia estar presente.
la última pregunta dice: Que todo lo Tambien sostenia con bien estrañas
que he dicho en las preguntas antes de doctrinas ser jurídico el no haberle
esta es público y notorio, pública voz y dado copia de los nombres de los tes
¿ y comun opinion. Y los testigos tigos con los autos, ni haber citado á
a concluyen, y supuesto que esta pre la parte de don Rodrigo cuando se ra
gunta se refiere á todo lo que ha di tificaron. Porque aunque es verdad que
cho, y cada cosa en particular; es cuando se da traslado del proceso ha
como si en cada pregunta la conclu de ser con nombres de testigos, no ha
yera, y el concluir de público y no debido ser en esta causa porque estos
torio, pública voz y fama, es con las no hubieran desplegado sus labios si
calidades necesarias, y que la ley pi hubieran sabido que habian de decla
de, para que sea fama, y este es el co rarse sus nombres, y si no hubiese sido
mun y ordinario estilo de probarla, el tan secreto y de visita este juicio, por
que se tiene en España calificado por que sabian no lidiaban contra don Ro
bastante, y en cuya virtud es la fama drigo, sino contra el duque de Lerma
por probada y que obra los efectos de que tan por su cuenta tomó la defensa
tal. Asi lo reconocen los letrados, pues y como tan suya miraba esta causa y
la articulan en favor del reo de la que estaba al lado del rey y el de Uceda,
misma suerte, y los testigos la conclu su hijo, en el lugar y privanza que se
yen y se tiene por bastante. sabe, claro está que podian justamente
Rechazaba el fiscal la escepcion de acobardarse y temer, y muchos se sabe
que el reo nada confesó en el tormento que lo han dicho asi, y que á saber que
y que enerva esta probanza y de que sus dichos y sus nombres se habian
resulta convencido. Por una contradic de publicar aunque los hiciesen peda
cion palpable y aduciendo multitud de zos, no hubieran hablado ni una pa
testos de jurisconsultos decia que esto labra.
consiste en la fuerza que en él desple Decia el fiscal que todo quedaba
gó, y que el tormento no obra regular saneado con haberle dado los nombres
mente lo mismo en un hombre noble de los testigos cuando se hizo la publi
ue en un vulgar y que por eso las leyes cacion de probanzas, porque si el saber
¿
de sufrirlo.
á los nobles generalmente quienes eran se encaminaba al poner
les tachas, entonces era el tiempo opor
Ademas que en el tormento se le tu n0.
preguntó solo sobre cosas particulares Rebatia el cargo que dirigia el reo,
y no sobre lo que estaba plenamente de que acusándosele de la muerte de la
probado como la muerte de la reina. reina no hubiese la junta procedido á
Rechazaba la idea espuesta por sus inquirir contra Mercado si le tenia por
abogados de que no se le ha dejado en culpado, y parecia inescusable que no
libre comunicacion con sus abogados estándolo éste lo estuviese don Rodri
ni dado los nombres de los testigos, go. A este incontestable argumento
esponiendo que esto habia sido jurí respondia el fiscal que esa considera
º
DON RODRIGO CALDERON. 00

cion no convence disculpa en don Ro casa de este hechicero, don Rodrigo le


drigo; son en cada uno los delitos dife habia abrazado y dádole ricas joyas y
rentes y distintos y asi puede proce prometídole su proteccion contra la In
derse contra uno y no contra otros. A quisicion que le perseguia, y donde se
don Rodrigo se le acusaba de su deli habia comenzado contra él un pro
to, el no ser acusado otro aunque fuera (26 S0.

cómplice no es causa para su disculpa, A los hechizos de éste, comenzaban


tanto mas no pudiendo saber los moti á atribuir las gentes el inmenso poder
vos que para esto ha tenido la junta ni que gozaba el don Rodrigo.
pudiendo tampoco obligar á que á él se Estendiase difusamente sobre el tra
le digan: y asi no era fundamento in to constante que Juara tenia con don
vencible el no proceder contra Merca Rodrigo ya cuando se hallaba la córte
do para que don Rodrigo se creyese en Madrid y en Valladolid, ya tambien
libre de aquella culpa, porque tampoco en los sitios reales siendo Juara una de
sabia lo que aun podia hacerse. las personas que mas concurrian á la
Recapitulando todos los cargos que casa de don Rodrigo de quien era casi
resultan en este capítulo concluia por comensal.
él pidiendo la imposicion de la pena El segundo género de delito de este
capital. capítulo era mucho mas grave. En el
En el sEGUNDo CAPITULo de la acusa hay un delito confesado por el mismo
cion contenia tres géneros de delitos: don Rodrigo, consta en el proceso y
el primero era hechizos, sortilegios y por sus mismas declaraciones ya sin
venenos. El segundo diversos asesina apremio alguno, ya en el tormento que .
tos y muertes, y el tercero que resalta mandó á don Alonso de Carvajal que
de estos dos, que si no puede designar hiciese matar á Juara. -

se con nombre cierto, se conoce su gra Para esto hizo que el don Alonso fuera
vedad por su misma incertidumbre y á buscarle á su casa de Madrid para ha
es el haber con capa de méritos y ser cerle salir á Francia. Quejábase éste
vicios obtenido á prevencion y con del mal pago que don Rodrigo le daba
tiempo del rey dos reales cédulas de por cuanto por él habia hecho y por las
perdon contra cuantos delitos hubie cosas que le habia dado para que estu
ra podido ser acusado. viese en el puesto que se hallaba, la
En cuanto al delito de hechicería mentándose , de que tan atropellada
tomaba ocasion el fiscal para hablar con mente le hiciese salir del reino temien
una difusion intolerable de la historia do le llevaban á matar.
de los hechiceros y haciéndose cargo de En vano don Alonso procuró tran
algunos objetos que, como hemos visto quilizar á Juara, y éste le pidió le dejase
se habian encontrado en casa de don verá don Rodrigo antes de irse para
Rodrigo en el acto de su prision y que recomendarle á sus hijos pues le saca
se usaban en aquella época de crédula ba de España pagándole tan mal lo que
supersticion, hallaba ocasion de acusar— le debia.
le no solo de indicios muy vehementes En el camino, y conforme á las ins
de dedicarse á la hechicería, sino de trucciones de don Rodrigo fué muerto
tratar con hombres que estaban repu en Hornachuelos Juara y arrojado á un
tados por hechiceros. pozo, y al sacar su cuerpo la justicia de
En los autos se hacia resultar que Hornachuelos halló un pedazo de per
Francisco Juara fué un famoso hechice gamino con unas letras y carácteres
ro y que don Rodrigo habia tenido con igual en la materia,, en la proporcion y
él estrecha amistad y valídose de su en las letras á uno de los que se halla
habilidad para sus hechizos. Constaba ron en poder de don Rodrigo al pren
que don Rodrigo habia mandado á un derle en Valladolid y que dijo ser un
criado suyo llamado Juan de Frias á remedio para el mal de corazon. Qui
buscarle para traerle á Madrid para nientos doblones dió don Rodrigo para
que con sus hechizos le sostuviese en don Alonso de Garbajal, Juan de Guz
la buena posicion y afecto en que se man, Pedro Caballero y otros á quienes
hallaba con el duque de Lerma y el encomendó la muerte del Juara, agra
rey: que muchas veces habia ido á la bándose esta circunstancia del asesi
52
«
440 CAUSAS CELEBRES.

nato con haberse pagado estos dineros se muy contento con las grandes re
del tesoro de S. M. y haberse mandado compensas que le habia ofrecido don
ejecutar esta muerte precisamente Rodrigo para un hermano suyo que
cuando la Inquisicion comenzó á proce venia desde Yucatan á la córte preña
der con mas vehemencia contra Juara. do de grandes esperanzas, y que pre
El motivo de la muerte de Juara y senció la muerte repentina de su her
lo mucho que se hizo por encubrirla II13 Il 0.
arrojando el cadáver á un pozo, debió Tambien imputaba el fiscal á don .
ser muy grande. Rodrigo la muerte de Alonso de Camino,
La causa que da el marqués á la que hallándose preso despues de be
muerte de Juara que llamó secreta, es ber un vaso de vino, cayó muerto in
porque dice que era un alcahuete que mediatamente,
acompañaba á Juan Diez, músico que Tambien culpaba de otra muerte el
entraba en su casa con miras de obse fiscalá don Rodrigo, y es la de Pedro
quiar á su esposa, y que tuvieron mu Caballero, uno de los que mediaron en
chas veces por él disgustos. el asesinato de Juara. Habiendo gran
El fiscal rebatia con muy buenas des presunciones contra don Rodrigo
razones esta disculpa tan injuriosa al por haber hecho que en la misma pri
honor de la marquesa, porque era es sion el cardenal Trejo, tio de don Ro
traño que don Rodrigo, en su celosa drigo, le visitase de su parte y haber
venganza, no se dirigiese contra el hecho que se le declarase absuelto como
Juan Diez, su ofensor principal, y si cómplice en la causa de la muerte de
contra el medio. - Juara.
Confirma la inverosimilitud y repug De otra muerte mas grave, cuya
nancia de esta disculpa el que la muer causa permaneció envuelta en el mas
te de Juara fué por ¿ de 1607, y profundo misterio, que se halla compro
Juan Diez, por cuyas entradas dice don bada por el testimonio de testigos con
Rodrigo que fué la muerte, no murió testes acusaba el fiscal á don Ro—
hasta los tres años siguientes, antes drigo.
continuó frecuentando la casa en la Agustin de Avila fué preso, senten
misma forma que antes á ciencia y pa ciado á muerte y ejecutado secreta
ciencia de don Rodrigo, llevándole él mente, y despues se quemó la causa,
mismo y haciendo que en su presencia
á todas horas de dia y de noche cantase,
¿ todas las reglas y
isposiciones del derecho con tales ca
comiendo y cenando delante de la mar— lidades y circunstancias, que su mis
uesa, y que entrase sin limitacion ni ma disonancia é inverosimilitud están
¿. Esto comprobaba que no po manifestando la violencia de un gran
dia ser la muerte de Juara por acom misterio.
pañará Juan Diez y llevar recados su Agustin de Avila fué preso por el
yos cuando al mismo Diez permitió el mismo don Rodrigo en persona sin que
mismo don Rodrigo hasta su muerte para esta prision precediese informa
la entrada franca en su casa, y le dis cion ni averiguacion ni constase hubie
pensó hasta lo último su amistad. se notoriedad, rumor ó fama del delito.
Aun dado caso de que hubiese sido Fué preso Agustin Avila en el mis
cierto el motivo que alegó para la muer mo palacio, fué conducido en lugar de
te de Juara don Rodrigo, no le eximiria prision á la casa del presidente de
de delito. Castilla. Este alto magistrado revesti
Acusábale ademas el fiscal de haber do ademas con el carácter arzobispal
mandado matar al padre Cristóbal Sua fué y no un alcalde de casa y córte el
rez, á quien don Alonso de Carvajal juez de la causa.
habia confiado unos papeles secretos, Don Rodrigo Calderon hacia de es
y que al venir á la córte el dicho reli cribano de ella. Comenzose la causa en
gioso á traer aquellos papeles relativos 2 de diciembre de 1608. Despues se
á la muerte de Juara, don Rodrigo hi obtuvo una cédula real en que se de
zo diligencia para que se los diese, lo cia procederse por mandato verbal
que habiéndolo consultado con otro de S. M. No hizo cabeza de proceso, lo
religioso yerificó el Suarez, poniéndo que pudiera pasarse por alto conside
DON RODRIGO CALDERON. 4.
=

rando al juez como presidente de Cas-1 pando el papel, que no con prisa ni des
tilla, que el acto era tan nuevo y tan cuido en materias judiciales y tan gra
ageno de su dignidad, que se pudiera ves, y en pliegos sueltos, cosa que era
atribuir á falta de estilo; pero como le no menos sospechosa que nueva.
consideraba habiendo sido juez tantos Este testigo tenia solo quince años;
años y que el primer rudimento de las asi lo dejaba ver por su mismo aspec
materias que trató era éste, mal se pue-to, y sin embargo, no se le nombró
de atribuir á esto ni justificarlo. Des-curador para su exámen.
pues para suplir este vicio se obtuvie- Al cabo de diez y ocho dias se exa
ron las cédulas con el mayor misterio minó un segundo testigo, que fué don
y precaucion para que quedase sanea-Alonso de Rojas, gran trascurso de
do este defecto, como tambien el de ha-tiempo sin duda para una causa tan ,
ber comenzado á examinar los testigos grave como la que se seguia, y en la
positivamente , con juramento para la que hacia de juez, un presidente de
causa secreta de que no constaban. Castilla, y de escribano un ministro
Era imposible que resolucion tan del rey.
grande se tomase sin ¿ que de La declaracion de este Rojas la es
esta no quedase un rastro ó indicio que cribió él mismo, no sabiendo por qué se
diese noticia de ella por escrito ó por hacia esta diferencia entre él y la Mota,
palabra. Punto en que apura el entén- cuya declaracion escribió el mismo Cal
dimiento y los sentidos ¿porque si lo que deron.
obligaba era la gravedad de la causa el Carearon á estos dos testigos con
celo de la justicia del rey, como se ca- Avila, el cual negó todos los crímenes
minaba sin poner en los autos esta no- que le imputaban; y estos , careos no
ticia y examinar quien la vió como pie- están firmados del juez ni de las par
dra fundamental y base del proceso? tes, requisito esencialmente necesario.
Hay que añadir que sin constar na- No hubo tampoco ratificacion en la
da de esto, cuando se llegó á examinar confesion de Avila, que era de donde
los testigos no se les preguntó gene— habia de cobrar su valor y fuerza,
ralmente, sino que de golpe procuró Es notable que muriese don Alonso
sorprenderles con esta pregunta: Di-, de Rojas de alli á tres meses ignorán
gan lo que saben de de otros acer- dose la causa de su muerte, sabiéndo
ca de la bujarroneria de que se trata. se solo que habia sido de un modo vio
Cosa que no puede atribuirse á, igno- lento y breve, estando comiendo un
rancia en el estilo por ser punto de de-requeson en Lerma. Hay todas las pre
recho ordinario y trivial, que no podia sunciones de que se le dió veneno.
ignorar un presidente del Consejo de Mas comprobado está el haberse
Castilla. tratado de dar veneno á Avila, hallán
Ademas por la declaracion del mis- dose en la prision á cuyo efecto se le
mo cardenal, duque de Lerma, y del puso para que lo bebiese en una canta
cardenal Trejo, se aseguró á los testigos rilla, dando la órden al guarda que le
que depusiesen contra Avila, que no acortase la bebida, para que apurado
se procederia contra ellos aunque re- de la sed bebiese de , ella. Esto está
sultasen culpados en lo que depusie- probado por el dicho del guarda, por
sen; cosa abominable en el derecho, el del cardenal duque de Lerma, y por
contraria y opuesta á la segura y recta lo que el mismo don Rodrigo confiesa,
administracion de justicia. ue él buscó el veneno, lo llevó á casa
Los testigos debieron ser necesaria- del presidente, y lo echó en la canta
mente cómplices, y el primero que fuérilla.
examinado fué don Pedro de la Mota, es- Este veneno permaneció cuatro dias
cribiendo la deposicion de éste por su puesto en la cantarilla para que bebie
propia mano el mismo don Rodrigo, en se de ella, y constituye uno de los de
pliegos sueltos, con renglones en unas litos mas graves, cual si el mismo Avi
partes apretados, y en otras tan desi-la, que tuvo la suerte de resistir á la
guales y las letras tan crecidas que pa-sed, lo hubiese tomado y muerto de él.
recia haberse hecho aquello mas con Con este motivo discurria largamen
objeto de ajustar á plana renglon ocu—º te el fiscal sobre lo espantoso que os
2 CAUSAS CELEBRES.
-a

el querer dar un veneno á un hombre ligrosa para la administracion de jus


¿? se halla en la cárcel bajo el peso ticia, y contraria á las leyes.
e una acusacion y de la salvaguardia Con este motivo disertaba largamen
de la ley. te el fiscal sobre el peligro que hay en la
El presidente del Consejo de Cas celeridad de las sentencias, y sobre
tilla, que seguia esta causa, la dejó de la ¿ exámen maduro con que
repente, ignorándose los motivos que deben proceder los jueces para pronun
tuvo para ello, no debiendo ser el sen ciarlas.
timiento de su propia dignidad, puesto Es muy notable que siendo la co
que la habia comenzado. mision del cardenal Trejo para averi
Hay bastantes conjeturas de que guar, y prender, y castigar estos crí
habiendo visitado por sí mismo diver menes, solo se limitó á proceder contra
sas veces el presidente al desgraciado el alguacil Avila que estaba preso, re
Avila cuando se hallaba preso, sintió sultando como resultaban otros culpa
por él piedad y lástima; le hablaba con dos, contra los que no se procedió ni
ternura, procuraba consolarle y darle se habló palabra alguna.
significativas muestras de su compasion Pronunciada la sentencia, es singu
como conociendo la sinrazon é inocen lar el modo con que se ejecutó la muer
cia con que contra él se procedia; y asi te. Sacáronle de la prision en que se ha
en la imposibilidad de remediarlo, pa llaba para colocarle en un palo. Bajo
rece que, aun cuando él sabia la causa pretesto de que se llevaba á carear con
de ello, que no debió de ser la de sodo sus acusadores, y como hasta alli le ha
mía por la que aparentemente se le bian vedado todo genero de comunica
procesaba, pues esto no hubiera inspi cion, con este ardid le impidieron sus
rado compasion sino deseos de casti últimos suspiros, pues no imaginando
garle, esto le obligó á hacer dimision tal engaño, y con la confianza de que
del cargo de juzgarle. iban á carearle, sea con quien fuere,
Entonces se mandó que el cardenal abrió su corazon á la esperanza; pero se
Trejo continuase aquella causa, espi vió burlada ésta. La comunicacion que
diéndose una real cédula el veinticinco él esperaba tener con alguien fué la úl
de marzo de mil seiscientos nueve tima boqueada y postrer despedida de
para que procediese, prendiese, y cas la vida, porque le llevaron á un jardin
tigase á los culpables: cosa notable, del secretario Francisco Gonzalez He
desde que se dió esta comision hasta redia, y alli le dieron secretamente
la muerte del alguacil Avila solo pasa arrote, acompañándole el mismo car
ron cuatro dias, y en ellos no dió auto ¿ Trejo y don Rodrigo Calderon,
ni diligencia alguna el cardenal. No habiéndole dado un instante antes el
podia ignorar este los vicios y nulida Santísimo Sacramento de la Eucaristía.
des que comprendia la causa, y el mo Con este motivo se estendia tambien
do irregular con que se habia tomado la largamente y con gran vehemencia el
confesion: por consiguiente no podia fiscal manifestando la inconveniencia
en justicia condenar al reo. Jamás se de ejecutar la pena de muerte acabado
habia tratado á , nadie con un rigor y de recibir el Santísimo Sacramento, y
una inhumanidad como fué tratado el citando las diversas leyes y autores que
desgraciado Avila; pues siendo la cár previenen que debe diferirse la ejecu
cel para la custodia del reo, y no para cion de la sentencia de muerte tres
su tormento, fué tanta la aspereza con dias.
que le trataron, que en cinco noches Caliente aun el cadáver le llevaron
le tuvieron sentado en una silla atadas á enterrar el mismo cardenal Trejo,
las manos atras, sin soltarle ni para y don Rodrigo Calderon, , y llegó la
comer, ni para las demas necesidades crueldad hasta el estremo de darle se
de la vida. pultura con los dos pares de grillos con
La brevedad de la comision en pro ue estaba siempre aprisionado.
nunciar la sentencia de muerte, y la Asi pereció el alguacil Avila, á quien
ejecucion es una de las cosas tambien se negó toda defensa, á quien se le acu
mas sospechosas, pues que no media saba del crímen de sodomía, delito co
ron mas que cuatro dias, celeridad pe nmun que podian haber juzgado los tri
DON RODRIGO CALDERON 413

bunales ordinarios, y que no fué mas y fuerte argumento en contra, porque


que un pretesto que sirvió para ocul mas viva é invenciblemente descubrie
tar otros respetos é intenciones secre ron los misterios y las injusticias que
tas, siendo todo una pura violencia la concurrieron para dárselas. -

que con él se ejerció. - Sacáronse estas cédulas despues de


Para enervar la fuerza y sustancia hecho todo. El cuidado con que en ellas
de la complicacion de delitos que exa se insertó cuanto habia pasado desde
el principio, descubre ya mas la sos
mina el fiscal detenidamente, y que re
sultan compendiados en el sólo hecho pecha, porque esta nimia diligencia de
de la muerte de Avila, alegaron los de suyo era sospechosa, y porque en ella
fensores de don Rodrigo Calderon tres conocieron los interesados que en esto
cosas: la una, que en todo aquello á él habian quebrantado las leyes y turba
no le tocaba parte ninguna, porque no do toda la buena administracion de
habia hecho el oficio de juez ni habia justicia, quedando sujetos, como per
errado en el derecho ni en el hecho ni sonas por cuya mano y cuenta habia
habia intervenido en las relaciones, ni corrido todo, á ser censurados y casti
en las comunicaciones con S. M., ni en gados en los tiempos venideros: por
el llenar las cédulas: la segunda que se ¿ la verdad y la justicia se estien
debia tener deferencia á las grandes y en mas allá de la época en que se co
eminentes personas que habian anda meten los delitos, y la justicia nunca
do en aquel asunto, como eran el pre duerme.
sidente del Consejo de Castilla y el car Ademas, estas cédulas fueron no
denal Trejo, que eran los jueces, y que tadas por don Gabriel, cardenal de
tenian la presuncion á su favor; que él Trejo, tio de don Rodrigo, y los borra
solamente habia actuado en todas las dores de su letra se hallaron entre los
diligencias como escribano: y la terce papeles de éste, cuando fué preso en
ra, que aun cuando hubiese interveni Valladolid. Estas cédulas se obtuvie
do, en nada habia habido delito, porque ron para resguardarse, y fueron falsas,
el rey lo habia sabido todo paso por pa porque se fundaron en haberse que
so, y habia dado las cédulas con noti mado los papeles del pleito, lo cual se
cia de los mas insignificantes porme ha desmentido por estar estos exis
nores: que asi quedaba saneado y sin tentes aun. En estas cédulas el carde
sospecha lo que se habia hecho con Avi nal Trejo y su sobrino se ajustaron á
la en la forma judicial, como en el gé los intentos suyos, pusieron las pala
nero de muerte secreta y lugar donde bras y las cláusulas á la medida de su
se ejecutó, como en la dispensacion de deseo, y en particular en la consulta
los demas testigos y cómplices que pu última, que aunque fué en nombre del
diera haber y que hay en la causa, por presidente, del confesor del rey y de
donde se convino en sobreseer en ella, don Juan Idiaquez la rubricaron todos,
sin pasar á la averiguacion y castigo y cuando llegaron á si convenia que
de los demas reos, disimulando con to mar el proceso de Avila, lo dijeron en
dos ellos. unas palabras equívocas y de doble
Detenidamente iba impugnando el sentido, el uno de que ya estaba que
fiscal estas disculpas, con muy buenas mado, y el otro de que se quemase, en
doctrinas, empero que no se ponian en lo que se veia que se caminaba con
práctica en aquellos tiempos, como la harto dolo. -

de que don Rodrigo, aun cuando hubie Ademas, individualmente don Ro


se recibido mandato espreso, no solo drigo, en lo que él solo intervino, y en
del duque de Lerma, sino del mismo lo º estaba convicto era en haber
rey, para proceder como se procedia dado el veneno al alguacil Avila, en
contra Avila, debia de haber resistido haber guardado los papeles, y en haber
¿ de no hacerlo; que por ha escrito al poner la declaracion de don
r obedecido habia incurrido en la Alonso de Rojas, dichos contra una
pena sin disculpa ninguna. persona grave y superior, los cuales
Impugnaba la defensa que se queria quiso reducir á actos. Y aunque él re
hacer con las tres cédulas que tenian conocido de la gravedad del caso, y
de resguardo, las cuales eran poderoso convencido de la justificacion dice que
414 CAUSAS CELEBRES.

no se acuerda haber oido tales palabras, Varios testigos deponen de la ene


está convencido con su mismo informe mistad terrible de don Rodrigo con el
y tambien los jueces de la junta saben confesor. Y los accidentes que acom
el juicio que deben hacer para compa pañaron á la enfermedad repentina de
rar la gravedad de aquel delito y me éste, le inducian á creer fuese efecto del
dir por él el castigo. veneno, ningun testigo deponia de la
in duda, por lo enfático y preña existencia del veneno, pero el fiscal
do de las palabras del fiscal, ebia ha invocaba el rumor público, lo que hacia
cerse aqui alguna alusion al príncipe, muchos años se habia dicho, y atribuia
ó á alguna de las personas reales. el que ahora nadie declarase por acto
El cuarto capítulo de la acusacion de religion y gloria de perdonar la
fiscal es culparle de haber dado vene ofensa de enemigos, pero que no por
no al confesor del rev. Estendíase el eso debia dejar de darse satisfaccion
fiscal en largas consideraciones sobre al concepto que entonces general
la dignidad y ministerio del confesor, particularmente se hizo de la ¿añ
padre espiritual del rey, archivo y sa y circunstancias de la enfermedad del
grado de sus pensamientos, palabras y confesor. ,
obras, su solo y supremo juez á quien El último delito de que le acusaba
está reservado el juicio de la vida, por el fiscal, era el de haber obtenido cé
cuya cuenta corre la disposicion de la dulas de perdon del rey don Felipe III,
conciencia, la calificacion y direccion último crímen en el que se veian rea
de sus acciones. Citaba tambien entre sumidos todos. Porque si los demas
otros textos, el de la Partida tercera, tan atroces y graves caben y son posi
que llama al confesor de rey mediane bles en la maldad del hombre, es to
ro entre Dios y Su Magestad, y que ha davía mas horrible el buscar la impu
en guarda su ánima. Agrava la culpa nidad de ellos con el mayor perjuicio
bilidad de don Rodrigo la causa porque del Estado, y el modo de redimirlos á
se cometió este delito, que era el celo costa de la autoridad y crédito del mo
que ponia el confesor en apartar á don narca y de su dignidad, y hacerlo acto
Rodrigo del ministerio, por lo que éste, de virtud y de mérito, cosa á que no
antes de que el confesor acabase de habian llegado los mas perversos cri
desengañar al rey de sus escesos, ni el minales.
pueblo se consolase con la esperanza Aducia el fiscal copiosas razones,
de verlos castigados, ni él dejare de para probar que los reyes por derecho
conservar su fortuna y estado, le hizo divino tienen precisa é indispensable
dar un veneno. obligacion de administrar justicia, na
Examinaba tres cosas que deben ciendo esta obligacion de la misma na
aparecer en este crímen, el cuerpo del turaleza.
delito, la causa de su comision, la per Invocaba las leyes positivas, las de
sona que lo hubiese cometido, y dis cisiones y casos de varios autores, de
curria estensamente sobre estos tres que el príncipe no puede disponer ni
puntos. mandar nada en que se ofenda la ho
El cuerpo del delito decia que es el nestidad y dé materia para delinquir.
veneno, de oculta naturaleza y de difí Tampoco puede el príncipe perdonar
cil probanza, y por esto fundaba su acu los delitos futuros y las penas en que
sacion solo en conjeturas, como lo ha cuando se cometiesen se incurriria,
bia hecho al acusarle de complicidad en porque se ofenderia á las buenas cos
la muerte de la reina. tumbres, á la utilidad pública y á las
La causa decia ser la enemistad leyes que tienden á evitar los delitos.
grande que mediaba entre don Rodrigo Por eso todas las condiciones y leyes
y el confesor, y como una prueba con torpes son imposibles. Tampoco puede
vincente de que don Rodrigo fuese la el príncipe, segun el sentir de todos los
persona que hubiese dado el veneno, teólogos, remitir el dolo y el fraude fu
citaba las palabras que éste habia dicho turo, ni pueden hacerlo el papa ni
el dia del entierro de la reina, de que la lev.
le faltaba otro puerco por matar, di principal deber y obligacion del
cicndo esto por el padre confesor. príncipe es la administracion de justi
DON RODRIGO CALDERON, 45

cia, el conservar y mantener á sus súb por dinero á personas insuficientes y en


ditos en ella. que tanto se habia perjudicado á la mo
De aqui la obligacion en que están narquía y á los particulares, no podia el
los reyes por los preceptos naturales y rey privar á los particulares la restitu
civiles, de administrar justicia sin es cion de las haciendas que le habian da
cepcion de personas ni materias: de do, y por lo menos á la Cámara, á quien
aqui la limitacion que ponen las leyes por ley están adquiridas. No podia
en su potestad, para que no se estienda renunciar y omitir la satisfaccion al
á aquello que sea en perjuicio de terce Tesoro real, averiguados los perjui
ro y con mas razon si fuese contra utili cios tan considerables que habia te
¿d pública y diese ocasion á delitos. nido por mano de don Rodrigo en
Estos inconvenientes resultarian con mercedes injustas y motivadas con
tra el público y los particulares, de falsos títulos, en aprovechamiento su
librar á los ministros de las residencias yo, como el pagar el alguacilazgo ma
de sus oficios y de las penas que por yor de Valladolid y otros.
sus delitos hubiesen podido merecer. La decision mas individual que po
Asi el fiscal decia, que el rey no pudo dia haber en la materia, y que vale y
en rigor perdonar á don Rodrigo ni
darle las cédulas de inmunidad y libe
prueba mas que todo lo dicºy que
pudiera habernos escusado el trabajo
racion aun cuando fuese de delitos de decirlo, que es la determinacion de
pasados. los jueces, pues sin embargo de haber
Enumeraba largamente el fiscal los puesto don Rodrigo por escepcion las
escesos cometidos por don Rodrigo, no cédulas y pretendido que le habian de
habiendo habido en su sentir nadie en valer, , y que no podia ser visitado ni
el reino ni fuera de él, que hubiese te acusado, la junta le ha visitado, y se
nido su hacienda libre de su rapacidad, ha procedido á la averiguacion de sus
citaba diversos casos consignados en el delitos: y si hay sentencia en la vi
juicio de visita, las cuentas con los ge sita, y juicio abierto, será texto mas
noveses á ganancia sin pérdida: los cabal é invencible, y una prueba plena
grandes empréstitos por tantos años y verdad cierta de que el rey fué en
con tanta pérdida de intereses del rei gañado, y los daños que don Rodrigo
no, las dádivas que á la fuerza se ar ha hecho en lo público y en lo particu
rancaban hasta al triste oficial, que lar á la Corona, han sido irreparables,
siéndole tan debido para su sustento y sin enmienda.
de sus hijos iba á reclamar el escaso Finalmente, decia el fiscal que no
sueldo de su destino. cupo en la potestad del príncipe el per
Era, por último, testimonio de su donarlos, ni pudo defraudar á su dig
codicia y violencia en lo mayor y en lo nidad, reputacion y crédito, ni al Es
menor, ver cuánta gente miserable y tado y particulares de la satisfaccion y
pobre, cuántos de mas porte han acu— castigo.
dido á la junta á pedir infinidad de deu Ademas el rey no tuvo voluntad ni
das del trabajo de sus manos, que de quiso dar semejantes cédulas, porque
muchos años se les debian, y que no se siempre es de presumir que en todas
habian atrevido á pedirlo hasta enton sus determinaciones se quiso ajustar
ces porque pendia de sus manos el ofi y conformar con lo que es de derecho.
cio ó destino en que cifraban su sub La prueba de esto está en que en la
sistencia. última cédula que es la que contiene
No pudo el rey absolver en la muer las claúsulas mas exageradas y exorbi
te de la reina la satisfaccion que se de tantes en la postdata añadió el rey de
bia á la dignidad y magestad real, que su letra dos renglones: que era su volun
no era suya ni i dispensar en ella, tad conceder todo ¿ en cuanto pu
y quedó ofendida en lo mas alto y esti diese licitamente.
mable. Asi opinaba el fiscal que el rey no le
No podia perdonar los delitos de concedia nada, supuesto que cuanto
hechizos y asesinatos tan ofensivos á don Rodrigo quiso que se le concediese
Dios, á la naturaleza y á la sociedad. iba ya inserto en la cédula, como era
En materia de los cargos concedidos traicion, ofensa á Dios y á las gentes,
416 CAUSAS CELEBRES.
-5

defraudacion de caudales, delitos tan «y palabras que hayais dicho en deser


atroces que el rey no podia perdonar vicio mio» y que cree que está mejor
lícitamente. el haberlas quitado.
Las mismas cédulas y lo que ocur Aparece tambien otro papel de don
rió para su obtencion y que consta en Rodrigo, en que advierte que no se
el proceso prueban su nulidad y nin-haga mencion del duque en la cédula,
gun valor. porque no conviene á su reputacion, y
Para impetrar estas cédulas hubo que haga que el rey ponga algunas pa
¿ tratos y comunicaciones para labras de su mano, como serian: he hol
isponer el ánimo del rey á hacer esta gado de firmar esta cédula por vuestros
gracia, instando repetidas veces, tor servicios, para que os sea resguardo en
ciendo la verdad sorprendiendo su todo tiempo.
ánimo el duque de le que tan gran Por último, hay otra carta del du
valimiento tenia con el rey y goberna que á don Rodrigo, encargándole que
ba como señor absoluto todas las cosas procure halagar al padre confesor por
del Estado. medio del cardenal Trejo, para que no
Hay una carta del duque á don Ro ponga obstáculos á la espedicion de la
drigo en que le dice que el cardenal cédula.
Trejo haga la cédula de perdon que El estado de favor que tenia con
abrace lo de entonces. el rey el duque de Lerma, el decidido
El cardenal Trejo escribe al duque afecto que profesaba á don Rodrigo, la
sobre la cédula y el como la ha hecho, intervencion en este negocio del car
diciéndole que con cualquier cosa que denal Trejo, todo revela que las cédu
se quitase no quedaria buena, y remi las, fueron alcanzadas con relaciones
tiéndole al mismo duque una carta falsas y con importunacion, habién
aparte para que pudiese enseñarla al dolo asi declarado el mismo rey, cuya
rey y poderle quitar la sospecha que asercion constituye prueba plena.
podria hacerle concebir la peticion de Concluia el fiscal despues de mu
esta cédula. -

chas y estensas razones, fijando como


Hay una carta de don Rodrigo al un punto inconcuso, que estas cédulas
duque preguntándole sobre el estado ganadas en su principio para malos fi
de la cédula y diciéndole que si quita nes y contrarios al derecho, llevaban
se algo de lo que llevaba no la habia en sí mismas el vicio de nulidad, y asi
ImeneSter. en ningun instante han valido.
Hay una respuesta del duque á Afirmaba ademas que estas cédulas
esta carta en que dice que la cédula en la sustancia con las cualidades
viene como de tal aljaba, y tal que no razones con que fueron obtenidas, equi
es menester quitar nada. valen á una probanza de mil testigos
Aparece otra carta ó respuesta de contestes, mayores de toda escepcion,
don Rodrigo en que pide que conven de que los delitos contenidos en la acu
drá añadir en la cédula unas palabras sacion, los ha cometido don Rodrigo y
que dijo á don Diego de Medrano y asi está convicto de ellos.
se lo suplica. Por aquel axioma de derecho de
El duque en otra carta le dice que que si venia pelitur judicialiter probat
volverá la cédula y la desea ver firma plene delictum, los delitos , que asoman
da, que no ha visto mejor papel y bien en la causa de la muerte de Juara v de
muestra el autor. la de Avila, abismos donde se pierde el
En otra carta avisa el duque á don entendimiento y los sentidos, resultan
Rodrigo que ha hecho firmar la cédula probados con la cédula de perdon, junto
y que queda en su poder y que se detu con la declaracion de Su Magestad.
vo para que el confesor la viese: y que En la cédula de perdon se dice, que
subió y se resintió con S. M. de que hubo hechizos para Su Magestad, con
hubiese añadido: en lo que licitamente Juara, que Avila no delinquió en
podia y que el rey le respondió que él lo que fué castigado, y que fué otra la
hacia con buena voluntad lo que podia. Call Sd.
Dice tambien el duque que el rey borró El fiscal terminaba acusando grave
las palabras que iban en la cédula de: mente á don Rodrigo por el crímen de
*º,
DON RODRIGO CALDERON. 417
-
ºe

haber obtenido las cédulas, que son la Olivares, pues el rey no tenia voluntad
mas fuerte probanza de sus delitos. propia en los negocios del Estado.
Decia el fiscal citando los versos Entendieron los jueces los deseos
de Ovidio en sus Metamórfosis, contra del rey, y mucho mas los del nuevo
Scila, pidiendo le falte el cielo, la tier ministro, tanto mas, cuanto que éste
ra, los elementos y los hombres, á en todas sus conversaciones propalaba
uien tanto los ha ofendido y agravia que en los principios del reinado de un
o, pidiendo que con su muerte respi rey jóven era necesario obrar con vive
re ¿ la corona de España, y celebre za y desembarazadamente, y que se de
el dia de la administracion de la justi bian presentar al pueblo ejemplos de
cia como el de su rescate, sirviendo que la justicia alcanzaba á los culpables
de ejemplo su castigo, y que pues tan por altos y encumbrados que estos se
parecido ha sido el estado de las cosas hallasen. Estas conversaciones repeti
y personas, al que se pinta en el capí das públicamente en las audiencias
tulo final de Esther, debia parecerse del ministro, y en los salones de pala
tambien en la demostracion, y ejecu cion fueron corriendo y circulando por
tarse sus últimas palabras, que tam todas partes, y preparando el san
bien serán las últimas de su acusacion. griento fin que iba á tener la causa de
Unde et vos inter caeteros festos dies don Rodrigo. Vieron los jueces clara
hanc habetote diem et celebrate eum, mente que el rey no queria que se tra
cum omni loetitia ut et impostorum cog— tase con clemencia á don Rodrigo Cal
noscatur omnes, qui fideliter Persis obe deron. -

diunt dignam, pro fide recipere merce Llegó pues el momento en que los
dem, qui autem insidiantur Regno, pe jueces tuvieron que votar y sentenciar
rire pro scelere. Omnis autem Provintia la causa de don Rodrigo Calderon, reo
et civitas, quae no haerit solemnitatis hu en haber mandado dar muerte á don
jus esse particeps gladio et igne pereat, Francisco Juara.
et sic deleatur ut non solium hominibus Gran discordia hubo entre los tres
sed etiam vestigiis in via sit in sempiter jueces para pronunciar esta sentencia.
num, pro eacemplo contemptus et inobe Don Francisco Contreras firmó des
dientiae. s
de luego: era un hombre descontento
«Tened entre los dias festivos este, del anterior reinado; antiguo magis
celebradlo con toda alegría para que trado que aguardaba en las mudanzas
sea conocido en la posteridad de todos que son consiguientes al advenimiento
los que obedecen fielmente á los per al trono de un nuevo rey, ocupar el
sas, como digno de recibir su recom mas alto puesto en la magistratura
ensa y de perecer por sus crímenes complaciendo al ministro conde-du
os enemigos de reino. Toda provincia que de Olivares, de quien todo de
y ciudad que no quisiese participar de pendia.
esta solemnidad, perezca por el fuego Al ir á firmar la sentencia don Luis
y la espada, y bórrese eternamente de de Salcedo hizo varias reflexiones. Co
la memoria no solo de los hombres sino menzó á discurrir en su voto, y repre
de los animales, como ejemplo de los sentándosele tantos castigos como ha
¿ desprecian y desobedecen los man bia sufrido don Rodrigo Calderon en el
atos reales. »
tiempo que habia estaba preso, y que
si habia ley que le obligase á morir ha
Esta violenta acusacion, en que se bia tambien otras muchas en contra,
da tormento á todas las leyes, y se con y que le absolvian de aquel delito, re
culcan todos los principios mas sagra servó su firma para despues, hasta ver
dos de la jurisprudencia, de la lógica cómo era el modo de votar de don Die
y hasta del sentido comun, para venir go del Corral.
á parar á un solo fin, la muerte del Este constante y resueltamente se
marqués de Siete Iglesias, don Rodrigo opuso en todo al voto de don Francis
Calderon, el valido del anterior reina co Contreras, teniendo por bastante
do, era la espresion de los deseos del pena les muchos años de estrecha
nuevo rey Felipe IV, ó por mejor decir, rigorosa prision que habia sufrido el
de los de su ministro el conde-duque de marqués de Siete Iglesias, sin mas es
53
418 CAUSAS CELEBRES,

pacio y desahogo que un solo aposento, y Dictóse la sentencia:


aquel de poquísima luz; de la privacion
de la hacienda, de que se le habia to Sentencia.
talmente despojado, y del menoscabo
de su honra; y de la separacion en que En el pleito y causa criminal que
lo habian tenido de sus hijos y de su con especial comision de S. M. ante nos
muger; del cruelísimo tormento que ha pendido y pende entre el señor li
habia sufrido por lo que no habia he cenciado don García Perez de Araciel
cho, pues el asesinato de Juara lo ha de su Consejo, que por real cédula ha
bia confesado desde el principio, sin ce el fiscal en ella de una parte, y de
que hubiese sido necesario para ello otra don Rodrigo Calderon, preso por
hacerle pasar por tantos rigores, has mandato del rey nuestro señor y su
ta haberle hecho saltar la sangre de procurador en su nombre, fallamos
sus venas, y hallaba equivalencia en atento á los autos y méritos de este
aquel castigo, dándole moderada pena pleito, que debemos declarar y decla
para los demas para no perdonar en ramos, que la parte de dicho fiscal en
teramente aquel delito, sin embargo cuanto acusó á don Rodrigo de culpa
que las leyes, esenciones, y privi do de la muerte de la magestad de la
legios que tenia por sus títulos, y ofi reina doña Margarita de Austria nues
cios, y el ser caballero de la órden de tra señora (que sea en gloria) no haber
Santiago le absolvian y reservaban del probado la dicha acusacion: dámosla por
énero de muerte á que le condenaba no probada; y en cuanto le acusó de ha
on Francisco Contreras; y que asi no ber dado hechizos, y con ellos haber
firmaba la sentencia, ni la firmaria en procurado atraer á sí las voluntades de
ningun caso, siendo este su parecer. dicho rey, nuestro señor y otras perso
Don Diego del Corral pasaba por nas, haber dado veneno al padre maes
uno de los hombres mas entendidos y tro fray Luis de Aliaga, inquisidor ge
concienzudos en la magistratura de la neral, confesor que fué de S. M. (que
época de Felipe III. Su determinacion sea en gloria), y haber hecho matar á
fué en breve conocida; causó gran sen don Alonso Carvajal, caballero de la ór
sacion en la córte, é irritó considera den de Santiago, y á el padre Cristóbal
blemente al conde-duque de Olivares, Suarez de la compañía de Jesus, á Pe
Hallábanse los enemigos de don Ro dro Caballero y Alonso del Camino: de
drigo Calderon en el momento en que claramos asi mismo, no haberlo pro
iban á tocar el término de su triunfo, bado, y absolvemos y damos por libre
con que éste se desvanecia por la en de ella á dicho don Rodrigo en todo lo
tereza de un recto magistrado. referido.
Así es que redoblaron sus instan Otro si: en cuanto le acusó de la
cias con don Luis de Salcedo, para prision que hizo de Agustin de Avila,
que desistiendo de su propósito, de no alguacil que fué de esta córte, y del
firmar sino despues de haber oido el proceso que contra él fulminó, y ha
voto de don Diego del Corral, diese el berle querido matar con veneno en la
suyo y lo firmase, mandando el rey prision, y últimamente de su muerte,
que pues eran tres los jueces, y ha y de todo lo demas que en ello pa
biendo de regularse la sentencia por só, y del dicho proceso resultó ha
la mayoría, vencido Salcedo, y puesto ber cometido delito de asesinato, y
que habia firmado Contreras, se halla muerte alevosa, habiendo hecho ma
ba concluida y en regla la sentencia tar á Francisco Juara por medio del
de muerte. sargento mayor don Juan de Guzman,
El juez Salcedo convino con los de á quien se lo pagó y otras personas, y
seos del ministro. Sus servicios no lo demas que en dicha acusacion se
tardaron mucho en ser pagados: re contiene y de haber pervertido con la
cibió un ascenso en la magistratura; mucha mano que tenia el juicio de es
siendo nombrado de la cámara, asi co ta causa, que pendió y se trató en
mo don Francisco Contreras subió al esta córte ante los alcaldes de ella,
puesto que tanto, habia codiciado, al amenazando y persiguiendo á uno de
de presidente del Consejo de Castilla, ellos, porque quiso y trataba la ave
DON RODRIGO CALDERON. 449

riguacion de dicho delito, y en ha ces se veia á la condesa de la Oliva


ber ganado é impetrado cédula de cual una miserable mendiga aguardan
S. M. de perdon y liberacion de sus do al rey á las puertas de su palacio,
delitos por malos medios: y al condé-duque de Olivares á las de
Damos la dicha acusacion por bien su casa por no ser recibida en ella,
probada, y por la culpa que de ello re arrojarse á sus pies á sus entradas y
sulta contra dicho don Rodrigo, le de salidas. Otras veces se la veia jadeante
bemos condenar y condenamos á que y sin aliento seguir el coche por el ca
de la prision en que está, sea sacado mino, esperar en el sitio del Escorial
en una mula ensillada y enfrenada, al rey á la salida del bosquecillo de
con voz de pregonero que publique sus San Lorenzo, y siguiéndole cuando veia
delitos, y sea traido por las calles pú que iba con su valido á la caza, y al
blicas y acostumbradas, esté hecho un aproximarse se postraba de rodillas y
cadalso en mitad de la plaza Mayor de con lamentos y gemidos partia el cora
esta villa, y en él sea degollado por la zon de cuantos la oian.
garganta hasta que muera; y mas le Aquella muger que antes de haber
condenamos en perdimiento de bienes unido su suerte á don Rodrigo era ya
la mitad, que aplicamos á la real ha señora de la Oliva con muchos lugares
cienda, y por esta nuestra sentencia y feudos, aquella señora que despues
definitivamente juzgada, asi lo pronun de su matrimonio con el valido habia
¿º mandamos con costas: Licen sido objeto de los obsequios de toda la
ciado don Francisco Contreras.—Li córte, se veia despreciada y humillada
cenciado don Luis de Salcedo.—Li cual una criatura abyecta buscando
cenciado don Diego del Corral y Are por todas partes proteccion y amparo
llano. -
para su desgraciado marido, y viendo
cerrársela todas las puertas. - =

Por otra sentencia civil que contenia No habia remedio para don Rodrigo
doscientos veinte y cuatro cargos, le Calderon; su corazon demasiado fiel
condenaron en 1250 ducados y le de se lo habia anunciado en el momento
gradaron de todos los oficios y merce en que lleno de esperanzas vino la
des que tuviese, y en cualquiera ma muerte del rey Felipe á, privarle de
nera le perteneciesen, pero sin tomar todas ellas. El mismo lo habia dicho,
en boca á sus hijos. él mismo habia profetizado su muerte
Se notificó esta sentencia á don Ro cuando oyó doblar las campanas por
drigo Calderon el dia 14 de julio de 1621 el fallecimiento del rey.
por el escribano de cámara y de la cau Era tan marcada la injusticia de ha
sa, Lázaro de los Rios. berle notificado una sentencia de muerte
Respondió con entereza don Rodri dictada sin mas que la conformidad de
go que la oia; y vuelto á un Santo Cris dos jueces, que no pudo el rey negar
to que tenia en su estancia dijo:—Seais la solicitud que hicieron sus defenso
bendito y alabado, Dios mio; cúmplase, res para que se nombrasen mas que
Señor, en mí vuestra voluntad!... revisasen la causa. Vano recurso; nom
Desde este dia al de su muerte, que bráronse otros dos, don Alonso de
pasaron tres meses largos, se le per Cabrera y don Gaspar de Vallejo.
mitió que le asistiesen varios religio Estos jueces cumplieron la mision
sos, y, entonces comenzó para él una para que habian sido nombrados; se
série de largas y terribles penitencias unieron á los dos que habian decretado
que asombraron á cuantos le trataron, la muerte y cerraron los oidos á todo
y que desarmaron la cólera y el odio de género de humanidad y misericordia.
sus enemigos escitando grande interés El don Alonso de Cabrera era un hom
en el pueblo. dispuesto á todo; instrumento precioso
Entretanto se veia al padre de don para las voluntades de un ministro
Rodrigo, encorvado y venerable capi déspota y tirano. El era el que aun en
tan de los tercios antiguos de Flandes, vida de Felipe III. habia admitido la
con la muger del marqués de Siete Igle comision de ir á detener en Villacastin
sias y sus hijos, llorando por los tribu al anciano duque de Lerma, á quien
males pidiendo misericordia. Otras ve habia enviado á llamar el rey moribun
20 CAUSAS CELEBRES.

do; era un hombre todo decidido por componia de seis platos, y de otros tan
el nuevo ministro. tos para cenar, empero lo mandaba re
Solo don Diego del Corral se mantu partir á los pobres, no comiendo mas al
vo siempre firme en su opinion, magní medio dia que unos sorbos de caldo, y
fico tipo que honra la magistratura un poco de cocido, casi apenas lo nece—
española y que no halló despues gracia sario para vivir. Por la noche tomaba
á los ojos del duque de Olivares y fué una conserva y unos huevos frescos; y
á poco tiempo separado del Consejo. esto á las repetidas instancias del
Empero le vengó la opinion de los hom guarda mayor.
bres de bien sus contemporáneos y la Pasaba las noches en oracion men
historia registra con orgullo hoy su tal, y el dia leyendo libros espiritua
nombre! les, y particularmente las obras de
Para la sentencia de revista recusó Santa Teresa de Jesus, de quien era
don Rodrigo al presidente Contreras y á especial devoto.
don Antonio Cabrera por consejo de Algunas noches tomaba unas disci
sus letrados, pero fué en vano; para es plinas, y las pasaba de rodillas, llo
ta recusacion nombraron á otros jueces, rando sus pecados, pidiendo á Dios
los que como por un horrible sarcasmo perdon y misericordia con el mayor
le declararon por pobre de solemnidad fervor. Se llenó el cuerpo de cilicios,
y como á tal le perdonaron la condena llevando sobre el pecho una cruz de
cion de doce mil maravedises por no puntas aceradas.
haber probado la recusacion. La aspereza con que se trataba, el
No se le admitió súplica de la causa rigor con que maceraba sus carnes era
criminal. igual á la vanidad que habia tenido en
La sentencia de muerte, notificada los tiempos de su opulencia, y al es
en 9 de julio, fué confirmada á los tres mero con que habia cuidado de su ga
meses y medio. llarda persona.
El mismo Lázaro de los Rios volvióá Tanto se espiritualizó aquel hombre
notificarle la sentencia el lunes 18 de que edificaba su ejemplo aun á los mis
octubre de 4621 , cuando ya lleva mos religiosos; y su confesor el padre
ba treinta y dos meses de prision, re fray Gabriel del Santísimo Sacramento,
cibió la noticia aun con mayor valor procurador general de la orden de los
que la vez primera, y volviéndose al carmelitas descalzos, varon ejemplar
Santísimo Cristo que tenia repitió las en virtudes y letras, tuvo que repren
mismas palabras que pronunció antes. derle por tañta aspereza y negarle la
Desde las tres de la tarde de aquel autorizacion que le habia pedido para
mismo dia 18 de octubre dieron li que el dia de su suplicio pudiese pu
cencia para que le visitasen á doce blicar por las calles sus culpas y pe
religiosos; y don Rodrigo, aun cuan cados: tan poco le importaban ya los
do no sabia precisamente el dia en respetos del mundo, escepto su honor,
que habia de efectuarse la sentencia, del que siempre se manifestaba suma
comenzó á disponerse con gran fer mente celoso
vor para morir. Ya desde la primera Su confesor repetia muchas veces
sentencia de vista pronunciada el 9 despues que en treinta y dos años que
de julio, hemos dicho que se habia dado hacia que confesaba á almas ejempla
permiso para que entrasen á visitarle res y siervos de Dios, no habia encon
algunos religiosos. Desde entonces ha trado otro mas penitente y fervoroso.
bia comenzado para él una época de El martes 19 de octubre, cuando se
fervorosa penitencia. hallaba ocupado en sus ejercicios pia
Dormia en una camilla de damasco dosos como todas las noches, se pre
azul guarnecida con plata; y desde en sentó en su estancia el padre fray Pe
tonces sacó un colchon que colocó en dro de la Concepcion, carmelita, el que
el suelo, y con una sobremesa de cuero iba á verle por hallarse indispuesto su
encima, y con una almohada cubierta confesor. Este, en virtud de órden
con su capa, dormia sin desnudarse si que habia recibido del gobierno, iba
no para mudarse de camisa cada tres á llevarle la noticia del dia de su
dias. Su comida era regalada, y se muerte, que se habia fijado para el
DON RODRIGO CALDERON. 42.

Jueves siguiente. Encontró á don Ro Despues se levantó con la mayor


drigo de rodillas, y en oracion mental. serenidad, y dijo que tenia que hacer.
Preguntóle éste á que venia, y le res Retiróse un momento detrás de la ca
pondió el religioso que á pasar la noche ma, y volvió á ponerse los cilicios que
con él. á persuasion de su confesor se habia
No estrañó don Rodrigo aquella vi quitado algunos dias antes, habiéndo
sita, porque hacia tiempo que ó bien selo impuesto por precepto, para que
su confesor ó bien el mismo padre fray se aliviase de tan contínuas peniten
Pedro de la Concepcion, ó algun otro, cias, las que hacia con el mayor recato
venian á acompañarle durante la noche. para que no lo notasen las personas
Comenzaron á conversar acerca de que le asistian.
las miserias y vanidades de la vida hu El resto de la noche lo pasó en
mana, y de o gustos de la eterna, espirituales conversaciones con el pa
comparando el religioso las escelencias dre fray Pedro, esplicándole éste los
de esta con los precarios de las de la premios que Dios da á los que saben
tierra. aprovecharse de lo que padecen, ofre
Don Rodrigo en el curso de la con ciéndole sus trabajos en cambio de su
versacion, Inovido por las santas pala sagrada Pasion. Era tanto el conten
bras del religioso, le manifestó que tro to que sentia don Rodrigo, que le con
caria de muy buena gana las gran testó á su confesor, que ojalá fuese asi,
dezas de la vida temporal por las de la y que sus pecados no fuesen parte pa
eterna, y que se hallaba dispuesto no á ra privarle de tanto bien, pudiéndole
perder una sino cien vidas para darlas asegurar que si no pareciese liviandad
or sus enemigos, á quienes perdona se echaria á reir.
a de todo corazon. Abrazó tiernamente al religioso,
De estas espresiones tomó márgen dándole gracias por haber sido el por
el piadoso religioso para reprenderle tador de la noticia de su muerte, la
de que no debía dar tal nombre de que consideraba como un medio se
enemigo ánadie sino el de hermano, guro de su salvacion. Recordó en
pues que tan de corazon los habia per tonces, lo que al consultar , su fuga
donado. Entonces lleno de la mayor do con la monja de su convento de Porta
cilidad don Rodrigo le dijo: Padre mio, celi le habia dicho aquella sierva de
conozco que he hecho mal, y acepto con Dios, de que mejor se salvaria quedán- º
toda humildad su correccion; y asi di dose en España, que no huyendo. Re
go que quisiera tener cien mil vidas cordó tambien con el padre fray Pe
para darlas gustoso por Dios y mis her dro, aquel terrible presentimiento que
manos, á quienes de nuevo pido, y á habia tenido en el mes de agosto, el
su divina magestad le suplico, me per año anterior, cuando con vestido res
donen plandeciente de oro, ginete en un brio
Conociendo el padre Gabriel lo pre so caballo, y con el baston de capitan
parado que estaba, creyó que era el general de la guardia alemana, se ha
momento de comunicarle la fatal noti bia, presentado en la Plaza Mayor de
cia, y le dijo entonces: Pues por esa Madrid, siendo objeto de la admiracion
conformidad, para dar á vuestra se de todos, del odio y la en vidia de mu
ñoría prendas de su gloria, quiere el chos, una voz interior le habia casi
mismo Señor venir mañana á darle las predicho, que algun dia en aquella pla
¿ por su buen propósito, pues ten za terminaria de un modo afrentoso
su vida.
rá que emprender un largo viage el
jueves sin falta. Al dia siguiente 20, por la maña
Ninguna duda le quedó á don Ro na, despues de reconciliarse fervoro
drigo de lo que significaban las espre samente, con acuerdo de su confe
siones del religioso. Se arrodilló de sor, que habia vuelto ya, y habiendo
lante de su crucifijo, y dijo tres veces: obtenido licencia de Su Magestad, que
Señor, hágase en mí vuestra santísi se la habia concedido para que testase
ma voluntad, que siempre con esta de dos mil ducados, dispuso algunas
paso todas las tribulaciones y con cosas en beneficio de su alma, man
gojas. dando que se le enterrase en el con
422 CAUSAS CELEBRES.
-
-
-na

vento de carmelitas descalzos de Ma en esto creia mas conveniente, es


drid, debajo del altar de Santa Teresa. cribió á su padre el 19 la siguiente
Despues de esto, . salió de su oratorio, carta. (1)
habiéndose puesto el manto capitular
de la órden de Santiago, y oyó devotí Padre y señor mio: fuera gran con
simamente la misa que celebró su con suelo para mí en la ocasion presente,
fesor, el cual la dijo de Santa Teresa víspera de ir á dar cuenta á Nuestro
de Jesús; y con grandísimos actos de Señor de mis grandes pecados que me
fé al tiempo de la comunion, dijo con han traido por justo juicio al estado
la mayor ternura; «Señor mio Jesu presente, verme á los pies de vuestra
cristo, pues hoy venís á mí, que ma señoría para pedirle perdon de tan
ñana vaya yo á vos: y al decir: in ma mal hijo como he sido, besándolo mil
nus , tuas commendo spiritum meum, veces á vuestra señoría, particular re
añadió: vitam meam et honorem meum.» comendacion de las obligaciones que
Despues de haber recibido la comu en este mundo dejo, porque como son
nion, para el Viático del terrible ca tan precisas no pueden dejar de darme
mino que debia emprender á la eterni cuidado, aunque todo lo pongo en ma
dad al dia siguiente, oyó todavía otras nos de Nuestro Señor. Confieso que he
cuatro misas con grandísima devocion, sido hijo desobediente, y que para mí
y todas siempre de rodillas. siempre vuestra señoría ha sido el pa
Terminado esto, hizo una espresa dre del hijo pródigo, y confiado en esto
declaracion con el objeto de libertar al le suplico tenga cuidado con mi alma,
sargento mayor don Juan de Guzman, que es lo principal, y tras esto vuestra
que se hallaba preso y condenado á señoría sea padre de la marquesa, aun
muerte por haber sido el instrumento que siempre lo ha sido y aguelo y padre
de que se habia valido para matar á de mis hijos, pues no les queda otro
Francisco Juara. En esta declaracion espejo en que mirarse, si no es en
manifestó, que Guzman se hallaba li vuestra señoría encomendándoles de
bre de la muerte que se le imputaba, y mi parte que tomen exemplo de mí
¿ él para que la ejecutase, le habia para echar de ver que poco que hay
ado una cédula real mal ganada, que que fiar en las cosas de esta vida.
despues le habia recogido. Quisiera yo á cada uno en particu
¿Era este un acto de justicia dicta lar significar el sentimiento de mi co
do por su conciencia, ó era un acto de razon en este desengaño conforme á lo
la piedad de su corazon, deseando li que de cada uno he conocido, remítolo
bertar de la muerte al hombre de quien á la discrecion de vuestra señoría pa
se habia valido durante su poder para ra que lo haga en mi nombre, pidiendo
la ejecucion de sus fines? Cosa es esta, á Dios Nuestro Señor, que por los mé
que no nos atrevemos á decidir, pues ritos de Jesucristo, su hijo, embeba en
que el referido Guzman, en su defensa el alma de vuestra señoría mi senti
¿ presentó semejante cédula ni miento en esto, para que se lo pueda
abló de ella. esplicar, me olgára que el conde se
A su padre, á su muger y á sus hi retirara de las cosas de la córte, y de
jos, los habian hecho salir de Madrid andar á respecto de grandes por ver
dos dias antes de verificarse el suplicio cuán caro me cuesta á mí lo contrario,
de don Rodrigo, ya para que no moles aunque el estado presente me escusa
tasen con sus lamentos al rey y al mi de acordarme de tierra en materia de
nistro á quienes perseguian sin cesar interés, pero como no puedo echar de
hacia un año, ya tambien por un sen mí la obligacion de padre, por esto me
timiento de humanidad. hallo obligado de advertir á vuestra
Don Rodrigo, que nada mas que de señoría lo siguiente:
los dos mil ducados podia testar, creyó Lo primero, que si por via de jus
que habiendo administrado las rentas ticia ó de ¿el para las satisfaccio
de su primogénito don Francisco, con— nes que vuestra señoría y mi señora la
de de la Oliva, podria éste ser consi
derado como un acreedor de justicia á (1) , Manuscritos de la Biblioteca Nacional de
su hacienda confiscada, y sobre lo que Madrid. D—156. -
DON RODRIGO CALDERON. 423
-

marquesa y los alimentos del conde y Algunos curiosos que permanecie


sus hermanos, y el derecho que tiene ron en la plaza, las gentes que alli vi
á mi hacienda mi hijo el prior por ha vian y los mas madrugadores dieron
ber gozado yo de los frutos de su enco en Madrid la primera noticia del suce
mienda; si se hubiese de escoger de so que debia verificarse algunas horas
los frutos que yo tenia alguno, se es mas tarde. Empezó á notarse grande
coja el de la Cruzada porque es renta animacion y muchísimo movimiento.
cierta y segura, y si se traen personas Mientras silenciosamente y con , el
de fuera del reino que labren el papel mayor sigilo se levantaba el cadalso
de las Bullas, multiplicando las resmas por la noche en la Plaza Mayor, pasaba
con lo que se ahorrase se pueden au aquella misma noche, la última de su
mentar dos mil ducados de renta, y vida, don Rodrigo conversando tran
asi tendrán mis pobres hijos alguna quilamente con los doce religiosos que
cosa con qué pasar, y si esto no se le asistian haciendo actos de caridad
pudiese se elija el oficio de correo ma y de contricion con grandísimas lá
yor que yo tenia. Esto se me ofrece, grimas, pidiendo á Dios perdon de sus
brevemente, vuestra señoría lo dispon pecados.
¿ y no digo mas porque estamos muy Al amanecer del dia siguiente á
e prisa para la otra vida, y es breve aquella fatal y angustiosa noche, se
el tiempo para los negocios de mi alma presentó en la casa prision de don Ro
que son de tanta importancia.» drigo el padre fray Juan de la Madre
de Dios, compañero de su confesor,
Llevábase con la mayor reserva to el cual le entregó una memoria de
do lo relativo á la causa de don Ro las misas y sufragios que le hacian los
drigo Calderon; asi es que se ignoraba religiosos y las religiosas de su órden;
en Madrid lo que pasaba en la prision unos le cedian seis misas de mérito,
de la calle Ancha de San Bernardo, otros se obligaban á rezar un número
cuando á las dos de la tarde del dia 20 de rosarios y hacer varios ayunos, to
de octubre se vió que comenzaba á mar disciplinas y mortificaciones y
desembarazarse la Plaza Mayor, en otros actos de devocion en alivio de
donde era el mercado de Madrid, y se su alma.
hallaba llena de cajones de los vende Recibió don Rodrigo con alegría
dores. Causó novedad aquella opera y con gran consuelo al mismo tiempo
cion discurriendo cada cual qué podria que con humildad, aquellos donativos
ser, porque no se habia querido publi religiosos que le hacian, ofreciendo
car la sentencia de los jueces á fin de mostrar su gratitud, empeñando su
que no se agolpase la gente ni se hi palabra de que cuando se hallase en
ciese demostracion alguna, temiendo la presencia de Dios procuraria pagar
algun alboroto, porque aunque don aquella caridad. En sus palabras mos
Rodrigo tenia muchos émulos, eran traba la mayor serenidad cual si no se
mas los apasionados, pues la desgracia hallase en un trance tan apurado y
habia convertido en favor suyo á los rigoroso, hablando y obrando en todo
que antes le miraban con envidia y con la urbanidad propia de un cabal y
con odio. -
cumplido caballero. -

Tal era la compasion de las gentes, Algunos le escribieron aquella ma


que si por dinero hubiera podido con ñana suponiendo que les debia peque
seguirse su libertad, dice un escritor ñas cantidades y reclamando su pago;
de aquella época, le hubieran salvado empero era tan justificado que no cre
á peso de oro hasta sus enemigos. yó deber disponer de nada en razon á
A las diez de la noche se vió llegar que estando confiscados sus bienes
á la Plaza Mayor una multitud de car— creia deber defenderlos y guardarlos
pinteros con tablas, los que con la ma para el fisco como si fuesen para sí.
yor premura empezaron á levantar un En aquella mañana hablando con el
cadalso, porque habia una órden es padre fray Juan de la Madre de Dios,
presa del rey de que habia de quedar le dijo don Rodrigo:
concluido enteramente á las dos de la —Padre, á mí me han quitado mis
madrugada. hijos, la hacienda y la honra y hoy me
424 CAUSAS CELEBRES.

han de quitar la vida; y no siento te-adios, adios, padre mio.—Madrid y oo


ner mas que dejarles, pues bastante tubre de 1624.—Rodrigo.
les dejo en el ejemplo de mi tragedia.
Verdad es que Cristo N. S. no sintió Toda la noche anterior á su muerte
la muerte, antes bien se alegró para la habia querido, pasar en oracion, y
que todos viviesen y de esta manera se solo á instancia de los religiosos se ha
salvasen. bia echado sobre un colchon abrazado
Despues pidió á su confesor recado con un Santo Cristo. Vencido por la na
de escribir, se retiró un momento á un turaleza, durmió algunas horas y cuan
cuarto y escribió á su padre esta sen do se despertó, preguntó al de fray
tida carta despidiéndose de él, reco Pedro si le iba á dar el sacramento de
mendándole á sus hijos. Cerró aquella la Extrema-uncion. Esplicóle el religioso
carta, la puso en poder del confesor en que no era costumbre y que los cáno
cargándole que la echase en el correo. nes prohibian la administracion de este
El confesor copió esta carta. sacramento á los que estaban conde
nados á muerte, en razon á que siendo
Padre y señor de mi alma, no dis virtud de la Extrema-uncion el perdonar
curro, que la triste noticia que por es las reliquias del pecado y dar salud al
ta doy á V. S. le asustará, segun lo que enfermo, si le conviene, aqui desde
tengo comunicado en mis anteceden luego no podria verificarse esta se
tes, triunfó la emulacion pero con tan gunda parte de la virtud del Sacramen
siniestro designio, que habiendo sido to. Entonces don Rodrigo le dijo que
su fin el perderme, me he ganado, pues pues carecia de lo principal, le hiciese
me aseguran lo principal, que es mi la caridad de esplicarle la ceremonia y
salvacion, segun la gran confianza que recitarle las palabras para que no mu
tengo en la divina misericordia. En la riese sin cosa de tanta importancia. El
revista se me ha confirmado la sentencia religioso tomó entonces el manual, pro
de muerte que padeceré mañana tan nunció las oraciones que la Iglesia tie
gustoso, que deseo por instantes que ne establecidas para la administracion
llegue el de , entregar la garganta á el de este importantísimo sacramento,
cuchillo, y derramar mi sangre, por la las oyó devota, humilde y atentamente
voluntad de mi señor Jesucristo, en con grande edificacion de todos los re
descuento de mis pecados, pues el mis ligiosos que le acompañaron en aque
mo Señor por mí tan liberalmente der lla administracion mental de uno de los
ramó la suya, y tambien porque asi sacramentos de la Iglesia.
place á la recta justicia del rey mi se Desde entonces, contento y satis
ñor: mucho me dilato, y el tiempo es fecho, no aguardó mas que el momento
corto, para lo que tengo que suplicar de la muerte dedicándose á una hora
á W. S. lo primero es, que este quebran de oracion mental, desde las cuatro á
to lo sacrifique y ofrezca W. S. á Dios las cinco de la mañana.
para que me sirva de guia ó alivio en Estaba destinado para auxiliarle
el purgatorio. Me encomiende V. S. á en el suplicio el padre fray Gregorio de
Dios, me eche luego que vea esta, su Pedrosa, que tambien le habia acom
santa bendicion y que reciba en su pro pañado en la última noche. Asi que
teccion á sus hijos y nietos mi muger amaneció, delante de su confesor se
y hijos, amadas prendas de mi alma, quitó los cilicios de que estaba cubierto
pues ya no les queda otro padre, todo su cuerpo para evitar los inconvenien
lo cual confio de su paternal amor, y ya tes de que se hiciesen públicas aque
que en este lance me veo sin el con llas manifestaciones de su penitencia,
suelo de W. S. bien podré decir Pater y despues, en presencia de todos los
meus ut quid dereliquisti me? el mismo demas religiosos que alli se hallaban,
Señor que dijo estas palabras en el ár poniéndose de rodillas, leyó una pro
bol de la cruz, me conceda ver á W. S. testacion de la fé que él mismo habia
en la gloria, y en esta vida (ya que la hecho y que en opinion de todos era un
mia es tan corta) me guarde á W. S. mu acto maravilloso y ejemplar.
chos años en su santa gloria, y le libre Terminado aquel acto religioso pidió
de émulos, para amparo de sus nietos, que le presentasen el vestido con que
DON RODRIGO CALDERON, 435

habia de ir á morir, que era una sotani la única alhaja que quedaba en su
lla larga, un capuz y caperuza de baye poder.
ta ¿ viendo que la sotana tenia A las nueve de la mañana fué don
cuello, pidió unas tijeras, y ayudado de Pedro de Mansilla, alcalde de córte,
uno de los guardas, cortó con sus pro hombre que habia sido siempre amigo
ias manos el cuello, diciendo que de de don Rodrigo, á quien en gran parte
¿ de ir escotado para que el verdugo habia debido su empleo, con sesenta
pudiera hacer su oficio sin embarazo al alguaciles de á caballo y treinta de á
guno. Hecha esta operacion con una se pie para dar las últimas órdenes para
remidad asombrosa, se vistió él mismo que se le condujese á las once en punto
la sotana, y al ver que no llevaba en á la ejecucion, siendo él el encargado de
ella la cruz roja de Santiago, de cuya la conduccion del reo hasta el cadalso.
noble órden era comendador, hizo la A las diez, y tres cuartos, el padre
observacion de esto reclamándola de su fray Gregorio de Pedrosa se presentó en
confesor: pero éste le dijo: el oratorio en donde se hallaba orando
—Asi ha de ir, señor, porque es don Rodrigo, y le dijo:
órden terminante. —Ya dicen que nos llama Dios y que
A lo que respondió con la mayor es hora de irle á buscar.
humildad -, Don Rodrigo besó la tierra humilde
—Cúmplase la órden. mente, se levantó y dijo al padre fray
Y volviéndose hácia el crucifijo que Gregorio sin turbarse:
tenia en la estancia: —Pues Dios nos llama, vamos de
—Seais, Señor, bendito, añadió, y prisa. -

hágase en todo vuestra santísima vo Y diciendo esto se quitó la capa so


luntad. -

bre la que estaba la cruz de Santiago,


Despues, ínterin llegaba la hora de y un criado suyo le puso el caperuz y
marchar al suplicio, pidió su capa en caperuza, y saliendo del oratorio dijo á
la que tenia puesta la cruz de Santiago su confesor:
y la colocó sobre su sotana. Advirtió —Padre mio, muy flaco me siento de
al mismo tiempo que el cuello de la chu cuerpo y alma.
pa fuera sin almidon y que se hilbanase El confesor le respondió:
el jubon, pues era postizo y que no tu —Espere W. S. en Dios y pídale fuer
viese trenza para que el verdugo no se zas que no se las negará, y mas en esta
hallase embarazado ó se detuviese para 0Cd Sl On.
sacarle, si no que fuese con un boton pa Pidió despues un vaso de agua del
ra que con el cuello del jubon saliese de que bebió dos sorbos, y á escitacion de
una vez cuando fuese tiempo, Hecho es su confesor tomó un huevo, unos sorbos
to, se calzó las espuelas y de este modo de caldo y volvió á beber agua. Antes
entró en el oratorio donde oyó nueve mi de bajar la escalera de su casa, en otro
sas puesto en todas de rodillas. La pri tiempo tan opulenta y concurrida de
mera la dijo un carmelita descalzo, á todos, quiso entrar en la estancia que
quien rogó que cuando echase en el caliz servia de tribunal y donde se hallaba
la partícula consagrada despues del Pa el alcalde Mansilla, su antiguo amigo,
ter noster, estuviese advertido que para despedirse de él. El alcalde con
echaba alli juntamente su alma para que lágrimas en los ojos, se adelantó á re
se empapase en aquella preciosísima cibirle hasta la mitad de la sala. Alli
sangre, imitacion piadosa de Santa Te estrechó la mano de aquel magistrado
resa de Jesus que la habia ejecutado asi que nada podia y que se veia por su
un Domingo de Ramos, y cuyo piadoso triste deber condenado á ser uno de
ejemplo quiso seguir don Rodrigo. los instrumentos contra el hombre por
Despues dió su rosario á un reli quien su corazon sentia tan tiernas
-gioso de San Gerónimo muy amigo suyo, simpatías. Un abrazo fué la despedida
advirtiéndole que por cada tercio de para siempre de aquellos dos amigos...
rosario tenia indulgencia para sacar Escena terrible y desgarradora que no
un alma del purgatorio, y que conside pudo menos de hacer verter lágrimas á
trándose ya como difunto lo hiciese en cuantos la presenciaron al ver la sere
su sufragio, enagenándose con él de nidadde don Rodrigo. Este recomendó
54
26 - CAUSAS CELEBRES,
- -
«

su muger y sus hijos al alcalde Mansilla, Llegóse el verdugo para atarle las
suplicándole despachase una instancia piernas con una cinta por bajo de la
que sobre intereses habian hecho y cincha, y al verle don Rodrigo, le dijo:
cuyo despacho dependia de él. Con —No me ates, amigo. ¿Piensas que
lágrimas en los ojos y oprimido el cora me tengo de irº Bien sé que voy á
zon, ofreció servirlos en cuanto pudiese InOTII".
el alcalde. Arrancóse de sus brazos don El confesor le dijo entonces:
Rodrigo y con paso firme comenzó á —Sosiéguese vuestra señoría, que es
bajar la escalera de su casa. Alli habian órden.
acudido algunos de sus criados que --Pues si lo es, ata, amigo, ata, dijo
comenzaron á dar gemidos y sollozos don Rodrigo al verdugo.
derramando lágrimas. Aun cuando por la sentencia se ha
Un inmenso gentío obstruia el patio llaba degradado don Rodrigo de todos
de la casa. Don Rodrigo cogió la mano los empleos, títulos, honores y merce
de algunos de sus antiguos criados pro des que el rey le habia hecho, los jue
curando consolarlos y diciéndoles con ces, los guardias, los religiosos y todas
ánimo firme: las personas que á él habian llegado le
—Señores, ahora no es tiempo de habian dado todos el tratamiento de
llorar pues vamos á verá Dios y eje señoría, y aquel Inismo dia, por una de
cutar su santísima voluntad. esas particularidades que son inconce
Llevaba el cabello suelto hasta los bibles en el hombre que tanta saña
hombros, la cabeza erguida, la barba habia desplegado contra él, se dió por
espesa y larga hasta el pecho, pues no el conde-duque de Olivares una órden
se la habia quitado en los treinta y dos terminante para que el verdugo conti
meses cabales º habia durado. su nuase dándole el tratamiento de se
prision. Despejada la escalera y el por— ñoría.
tal de la casa, llegó á ella don Rodrigo Es absolutamente falso lo que algu
y alli le aguardaban en la calle los mi nos escritores y romances de aquella
nistros de córte y los cristos de la co época han ¿ suponer de que hu
fradía de los ajusticiados. Hasta alli biese sido degradado en la prision por
le acompañaron los religiosos que ha el consejo de Ordenes de su órden de
bian pasado con él las últimas no Santiago. Lo que hay de cierto es que
ches. Alli se despidieron con muchas no se quiso que llevase la cruz roja al
cadalso: despues en sus funerales se
lágrimas y sollozos, abrazándoles á to
dos don Rodrigo rogándoles que le en colocó sobre el túmulo en el Cármen,
comendasen á Dios. lo que no hubiera podido hacerse si
Al bajar el último escalon, encon hubiese mediado la ceremonia de de
tró una de las mejores mulas de su ca gradacion.
balleriza ricamente enfrenada y ensi Habiendo subido en la mula con
llada de luto. Entonces debió padecer gran donaire y tranquilidad, la sacó
su espíritu, empero con una tranquili del portal de su casa, llevándola del
dad admirable dijo al verla: diestro el verdugo; y asi la condujo to
—Jesus! ¡ah, mi mula! Yo habia de do el camino. -

ir en un seron en el que me llevasen Al salir de la casa se santiguó, y


arrastrando y atenaceando las carnes! sin perder el color ni sentir flaqueza
Despues saliendo como en los tiem alguna, rodeado de los religiosos, miró
pos de su poder y privanza cuando iba á todas partes considerando la muche
á los torneos, se compuso cuidadosa dumbre de gente que le esperaba, que
mente la ropa, colocó el pie en el es era tal que por las calles no podian
tribo, teniéndole el otro el verdugo to romper los alguaciles. Las ventanas,
mó las riendas en la mano izquierda, los balcones y hasta los tejados se ha
besó el Crucifijo que le presentaba su llaban cubiertos de gente. Don Rodri
confesor, y subió de un salto en la mu go fijaba la vista en el Santo Cristo que
la con la mayor bizarría y elegancia. llevaba en las manos, el que besaba
Luego se compuso el capuz, lo echó con grandísima devocion, sin apartar
sobre los hombros, y volvió á tomar el de él los ojos en todo, el camino. Era
Santo Cristo besándole muchas veces. esta imágen un cuadrito pequeño al
*

DON RODRIGO CALDERON, 27


-
-

óleo, que habia sido propiedad del em cual le manda degollar. Quien tal hizo
rador Cárlos V, y al que habian con que tal pague.
cedido con solo mirarle, indulgencia
lenaria varios pontífices, y que se ha Los términos vagos en que se ha
laba tasado en siete mil reales. Aquel llaba concebida la sentencia de un
cuadro lo habia llevado, don Rodrigo hombre á quien por treinta y dos me
en todas las vicisitudes de su suerte y ses se habian estado acumulando los
ahora lo habia escogido para que le delitos mas atroces, y á quien se im
acompañase hasta el cadalso. ponia el último suplicio por culpas que
Con gran dificultad podian abrirse en aquella época se reputaban por
so los noventa alguaciles que prece muy pequeñas, aumentaron la compa
ian al reo por el inmenso pueblo que sion de las gentes, que vieron en aque
obstruia las calles, y que se desha lla ejecucion una sentencia cruel y ti
cia en sollozos mirando aquel hombre ránica.
á quien habia admirado pocos años Habia el pueblo olvidado ya la anti
antes en todo su poder. Al verle ahora gua soberbia del hombre, del poderoso
con los cabellos grises, su barba larga valido, y solo veia el infortunio: no
hasta la cintura, cubierto con una tú veian la culpa sino la envidia y la ven
nica negra, con un aspecto triste, la ganza del nuevo ministro de Felipe IV,
palidez en su rostro, inspiraba á todos que le llevaba al cadalso!..
los espectadores sentimientos de amor Eran tales las cosas favorables que
y veneracion. hacia la muchedumbre á don Rodrigo,
A las repetidas voces que exhalaba ¿ éste no pudo menos de alentarse á
el pueblo diciendo: Dios te perdone! ecir á su confesor: «Padre mio, ¿es
Dios te dé valor! Dios te dé buena esto ir afrentado? Esto es ir siguiendo
muertel don Rodrigo respondia á todas: á mi Señor Jesucristo en triunfo y en
—Amen, Dios os lo pague; ¿. á ¿ A su Divina Magestad le iban
cumplir la voluntad del rey del cielo y lasfemando d escupiendo, y á mí me
de la tierra. van encomendando á Dios y dándome
Se habia dado órden de que no se muestras de compasion: rueguen á Su
pidiese por él limosna pública, como Magestad, padres mios, no quiera pa
se hacia con los reos ordinarios, y tam ¿ aqui en vida el trabajo que pa
bien se habia prevenido que las cam ezco por el mucho gozo que siento!»
panillas de las cofradías y el pregone— Respondióle su confesor: «Dice bien
ro fuesen muy adelante, de suerte que vuestra señoría, que triunfando va;
don Rodrigo no oyese ni lo uno ni lo pues Dios le espera en la Plaza con los
otro para que no le inquietasen. Tam cielos rasgados para arrebatar á vues
bien se habia mandado que todas las tra señoría, y llamarle para sí.»
bocas calles se atajasen para que no Llevóse la crueldad hasta hacerle
entraran coches, porque no faltaban pasar por todas las casas de los jueces
temores y recelos de que pudiese ocur que habian entendido en su causa. La
rir alguna desgracia, ó acaso suscitar carrera que llevó la fúnebre comitiva,
se algun tumulto, pues se habia obra - fué: por la calle Ancha de San Bernar
do una especie de reaccion en la opi do, desde su casa á la plazuela de Santo
nion pública: el ódio se habia conver Domingo, adonde se dió el primer pre
tido en lástima y compasion. gon; despues pasó por el monasterio de
Marchaba el pregonero muy delan los Angeles (el cual se halla hoy derri
te, leyendo el pregon que le habian bado y forma actualmente las casas de
dado escrito en un cartel los jueces, y Gaviria en la calle de los Caños del Pe
que decia: ral), por delante de la casa de don Luis
de Salcedo, consejero de Castilla, y uno
Esta es la sentencia y la justicia que de sus jueces; alli volvió los ojos á su
manda hacer el rey Nuestro Señor á confesor, y dijo: «Padre mio, ¿podré
este hombre porque mató á otro alevosa ofrecer á Dios el haberme traido por
y asesinamente, y por la culpa que tuvo todas las calles de mis jueces, por
en la muerte de otro hombre, y otros que en esto he imitado á Cristo, señor
delitos que del proceso resultan; por lo nuestro?»
428 CAUSAS CELEBRES
- =-:º e

—Vuestra señoría lo ofrezca, le con como traidor, y dijo al padre Pedrosa:


testó el confesor, pero no se me divier «Yo no he sido traidor. ¿Me quieren de
ta con cosas tan pueriles. gollar por detras? ¿Como está el cadalso
Lleváronle despues por delante de sin luto?—Señor, le contestó el padre, el
las casas de don Diego Corral, y de don cadalso y la silla toda la mañana estu
Francisco Contreras, que fueron sus jue bieron cubiertos de luto hasta las diez
ces principales, y en seguida por la de que hubo órden para que ni el tablado
don Alonso de Cabrera, á quien habian ni la silla lo tuviesen.» El padre le dijo
señalado para la revista. Continuó su ademas, que no le habian de degollar
carrera por la plazuela de Santa Catali sino por delante, y que el estar el ca
na de los Donados, y por delante de la dalso sin luto era por ser estilo; y que
casa de don Gerónimo de Barrionuevo no se distrajese porque el demonio an
de Peralta, donde vivia otro de sus jue daba solícito para inquietarle: en lo de
ces, cuyas ventanas y puertas perma mas, yo respondo que se le degollará
necieron cerradas. á W. S. por delante.
Al atravesar el arroyo de la calle Tranquilizóse con esto don Rodrigo,
de las Fuentes, gritaron unas mugeres y dijo al padre Pedrosa y á su confesor:
á grandes voces: Dios vaya contigo y Descansemos un poco.
te perdone tus pecados. Y don Rodri Sentáronse los tres en una tarima
go, sin mirar quien lo decia, alzó los en que estaba clavada la silla para de
ojos al cielo, y dijo: «Mi Dios, por la gollarle, y los demas religiosos, que
santísima sangre que derramásteis por eran doce, se pusieron todos de rodi
mí, que hagais lo que os pide vuestro llas. Don Rodrigo pidió un Breviario, y
pueblo.» alternó en las oraciones con los reli
Continuó por la calle de las Fuentes giosos, rezando devotamente el Sal
á subir por la plazuela de Herradores, mo 50.º el Miserere sin turbarse. Des
entrando en la calle Mayor y dirigién pues le dijeron la recomendacion del
dose á la Plaza. Al avistar esta, rehusó alma; y al pronunciar las letanías con
entrar por la calle de la Amargura (hoy los religiosos decian estos: ora pro eo, y
del Siete de Julio), que era por donde don Rodrigo respondía ora pro me!
pasaban los reos, y con ese motivo Terrible y desgarrador era el es
dijo: «Yo no soy criminal, ni traidor al pectáculo que presentaba aquel hom
rey; soy un caballero que va á sacrifi bre con su luenga barba gris, cubierto
car su vida por la envidia de sus ému de luto, rodeado de doce religiosos, al
los; por consiguiente, debo entrar por ternando con tranquilidad en recitar
la calle de Boteros» (hoy de la Milicia las oraciones que la Iglesia ha consagra
Nacional.) Hincó espuela á la mula, y do á los moribundos!!!
se dirigió por alli, no habiendo asi pa Un silencio general, que solo in
sado por ninguna de las calles por don terrumpian algunos ahogados sollozos,
de se llevaba á los reos comunes. reinaba en la gran plaza de Madrid.
Llegó al cadalso, que se hallaba co Tres cuartos de hora duraria este im
locado en la parte del Mediodía de la ponente acto cuando á don Rodrigo se
Plaza, casi debajo de los balcones de la llegó el verdugo y le dijo que ya era
Panadería Real. Se desmontó de su hora.
mula con el mayor donaire, y arri Al punto se levantó del asiento don
mándose á una puerta de una contra Rodrigo y dijo á su confesor: «Padre
valla que habia, se echó con gracia mio: muy contento estoy de ver que
el capuz sobre el hombro derecho; hace Dios en mí su voluntad! bueno
subió seis gradas del patíbulo, en don será darle gracias, y que nos confesemos
de le esperaba el padre Pedrosa, y asi para morir y que me absuelva por la bu
que lo vió mostró tanto regocijo, que se la que aqui tengo conmigo:» la cual sacó
echó áreir, y le alargó la mano para de un bolsillo, y se la dió con la fé de
subir el resto de la escalera. bautismo la protestacion de la fé
Apenas habia puesto el pie en el ta que habia hecho.
blado cuando reparó que éste se halla Se santiguó; separóse un momento
ba sin luto. Entonces le asaltó la preo el padre Pedrosa, y se reconcilió con
cupacion de que iba á ser castigado su confesor postrándose en tierra para
DON RODRIGO CALDERON.
-

recibir la absolucion. Aunque en todas silla con una cinta de colonia negra y
las confesiones que habia hecho en la ancha, y durante esta operacion le dijo
prision se habia postrado en tierra, coel confesor, que tambien habian atado
mo es costumbre en los actos religio á Jesus, con cuya idea feliz empezóá
sos de los caballeros de la órden de recordar la sagrada Pasion con vivo
Santiago, habia querido y propuesto á afecto y amor divino.
su confesor no hacerlo en tal acto pú Luego dijo al verdugo:
blicamente, porque no pareciese vana —Cuando sea tiempo, alza el capuz
gloria; empero el confesor le habia en y quítame una banda que traigo , al
cargado que se postrase, y que por su cuello que es con la que has de vendar
cuenta tomaba él no ser vanagloria. los ojos.
Despues se sentó otra vez en la si Quitósela en efecto el verdugo, le
lla; mejoró de asiento volviéndose á vendó los ojos y desabotonó la camisa
levantar, y sentándose por último para poniendo el cuello á un lado. Como
no volver á levantarse jamás. Entonces era , preciso al vendarle los ojos atar
echó el capuz detras de la silla, y se la cinta de tafetan por detrás, creyó
volvió á mirar para ver si hacia buena que iba á degollarle como traidor y cón
figura: hizo como César, que al verse gran viveza volvió la cabeza hácia él
herido por los puñales de los asesinos, y le dijo:
y al exalar su último suspiro, compuso —¿Que haces, amigo? Mira que no ha
sus vestiduras para morir con el ma de ser por ahí.
yor decoro. Tanto le preocupaba la idea de la
Era, tanta su serenidad y su brio, infamia ¿ llevaba consigo el suplicio
que dirigiéndose al verdugo le pregun siendo degollado por detrás. Era la
tó: «¿Estoy bien?» Y le respondió este: única cosa que vino á distraerle en sus
«Si señor; y perdone W. S. por amor de fervorosas disposiciones para recibir
Dios, que bien sabe que soy mandado.» la muerte; el cuidado de la honra de
—Si, amigo de mi alma, le respondió, sus hijos!.
y abrazó prosiguiendo en actos de con Despues que le hubieron vendado
tricion y oraciones, hasta el momento los ojos y que habian desaparecido de
de la muerte. su vista las cosas del mundo, con voz
Díjole fray Pedro: esforzada, dirigiéndose á los religiosos
-Ea, señor, esta es la hora en que que de rodillas rodeaban el fatal asien
V. S. ha de mostrar su ánimo y valen to en que se hallaba, les dijo:
tía pues ya hemos llegado al último —Padres mios, no se vayan de aqui.
trance de la batalla! Rerpondiéronle los religiosos que
Don Rodrigo respondió: alli se estarian, y el padre confesor
—Padre mio, nunca he estado mas añadió:
contento ni mas animado y gozoso. —Pronuncie W. S. por tres veces e
Llegóse á él el verdugo para atarle nombre de Jesus. -

los pies. Don Rodrigo se volvió y le En aquel momento hizo el alcalde


preguntó: Mansilla la acostumbrada señal con el
—¿Que haces, amigo? pañuelo blanco.
Contestáronle los religiosos que era Don Rodrigo repitió con grande es
estilo, y entonces respondió: píritu y fervor el nombre de Jesus la
—Pues haz tu oficio. primera vez... la segunda... empero al
Atóle los brazos á los de la silla y pronunciar, la tercera, el verdugo le
al instante se los ofreció diciéndole: echó el cuchillo á la garganta. Asegu
—Toma y ata. raron los religiosos que era tal su valor
Despues que estuvo atado llamó al y serenidad y se hallaba tan poseido
verdugo y le dijo: del espíritu de Dios, que le oyeron
—Abrázame otra vez. pronunciar, despues de degollado, por
Ya que no pudo echarle los brazos tercera vez el dulce nombre de Jesus.
por tenerlos atados, inclinó la cabeza El pueblo que habia permanecido
cuanto pudo con grande humildad y le en un religioso silencio, prorumpió en
dió un beso de paz en la megilla iz un terrible gemido y hubo grande con
quierda. Despues le ató el cuerpo á la fusion en los momentos en que don
:

430 CAUSAS CELEBRES.


=

Rodrigo acababa de dejar la escena tem las que amortajaban á los ajusticiados,
pestuosa de este mundo. porque entonces aun no se habia esta
Estalló una inmensa gritería; casi blecido la hermandad de la Paz y Cari
todo el mundo vertia lágrimas, y en dad. Ya preparados los ánimos de las
el rostro de todos veíase ¿ado el gentes con la muerte de don Rodrigo,
sentimiento por la desgracia de aquel que miraban como una venganza, aca
hombre á quien años antes todos odia baron de irritarse al ver aquel espec
ban y en aquella misma plaza habian táculo repugnante, y mucho mas cuan
mirado con enconada envidia. El padre do todos vieron aquel cuerpo entera
fray Gregorio de Pedrosa, al hacer al mente demacrado, acardenalado de los
pueblo la plática acostumbrada , desde azotes que se habia dado en penitencia
el cadalso, afirmó que el alma de don de sus culpas, deshechas las rodillas y
Rodrigo habia volado al cielo, porque cubiertas de llagas por el mucho tiem
en la larga vida que llevaba consagra po, que habia estado en oracion. Cu
do á las funciones sacerdotales y ad briéronle con el hábito de San Francis
ministracion del sacramento de la pe co por mortaja.
nitencia, no habia conocido jamás un El conde de Luna y el de Bena
hombre que muriese con mejor dis vente, se habian constituido como
posicion. cabezas para convidar al entierro
Acto contínuo se dió el pregon á todos los grandes, títulos y cofradías
para que ninguno quitase de alli el de la córte. Aquel aparato que iba á
cadáver, pena de la vida al que lo con desplegarse por el hombre á quien
trario hiciese. pocas horas antes habia herido la jus
El verdugo, el muñidor y el confe ticia del rey, hizo temblar al ministro
sor le desataron de la silla, tendieron conde-duque de Olivares; temió esta
el cuerpo sobre un paño negro apoyan manifestacion popular y se dió una
do la cabeza con el rostro descubierto
órden prohibiendo la pompa y man
en dos cogines de terciopelo, ponien dando que se le llevase á enterrar en
do entre sus manos una cruz de el convento del Cármen descalzo sin
cera. Cuatro blandones con hachas de mas acompañamiento que el de seis
cera amarilla alumbraron el patíbulo hermanos obregones del hospital de
y todo aquel fúnebre espectáculo. Anton Martin, sin que pudiese haber
Asi permaneció el cadáver del pode clamor de campanas y con solo la cruz
roso don Rodrigo Calderon, marqués de de la parroquia delante. . -

Siete Iglesias, ministro que habia sido Hallábase la capilla mayor del Car
del rey Felipe IIl., desde las dos de la men descalzo, que habia sido fundado
tarde, hora en que se ejecutó su supli por don Rodrigo y de que era patrono,
cio, hasta cerca del anochecer. A aquel ya enlutada para celebrarse en ella el
tablado acudieron casi todos los reli entierro, cuando una hora antes llega
iosos de los numerosos conventos de ron órdenes terminantes del ministe
adrid para decirle responsos. rio para que se quitasen los lutos, lo
Aunque solo habia podido testar que acabó de escitar la indignacion pú
de dos mil ducados, los que habia dis blica al ver hasta que punto llevaban
tribuido en mandar decir misas por la saña sus contrarios.
su alma, no quedó persona alguna no Esto habia sucedido el dia 21 de
table de la córte, grandes y títulos, octubre de 624.
que no le mandasen decir muchas mi Era tal la simpatia que habia ins
sas, y aun muchos religiosos las dijeron pirado don Rodrigo, y tales las mues
espontáneamente sin interés alguno, tras de veneracion y deferencia que
porque, como hemos dicho, se habia el pueblo en su sentimiento le tribu
prohibido pedir limosna para su alma taba, que desde entonces nació el re
como se hace con todos los reos, para fran castellano: andar mas honrado
evitar de este modo una manifestacion que don Rodrigo en la horca, que otros
pública de interés en su favor. traducen tener mas orgullo que don
Al anochecer volvió el verdugo á Rodrigo en la horca, traduccion que
desnudarlo pública y deshonestamente no tiene sentido comun atendida la
con dos mugeres ordinarias que eran humildad, la contricion y la peniten
*-

DON RODRIGO CALDERON. 434

cia con que hemos visto llegó hasta sus sagró á la muerte del ilustre degollado
últimos momentos. otro sentido
No solamente el pueblo demostró
su interés por la muerte de este hom SONETO.
bre de tan eminentes cualidades, sino
que los poetas mas famosos de aquel Tu vida fué invidiada de los ruines,
tiempo, época de gloria la mas brillan Tu muerte de los buenos fué invidiada,
te de la literatura española, le hicie Dejaste la desdicha acreditada
ron objeto de sus alabanzas y compo— Y empezaste tu dicha de tus fines.
siciones en verso. Don Juan Lope de Del metal ronco fabricó clarines
Zárate, don Antonio Lopez de Vega, Fama, entre los pregones disfrazada:
don Juan de Jáuregui, don Alonso Mig Y vida eterna, y muerte desdichada
narús, Juan Bautista Veles, el inmor En un filo tuvieron los confines.
tal de Vega, Andrés de Mendo Nunca vió tu persona tan gallarda
za y el desgraciado conde de Villame Con tu guarda la plaza, como el dia
diana, que pocos años despues debia Que por tu muerte su alabanza aguarda.
sucumbir víctima de los celos de Fe Mejor guarda escogió tu valentía,
lipe IV., le hicieron asunto de sus Pues que hizo tu ángel con su guarda
mas bellos versos y composiciones. En la gloria lugar á tu agonía.
El conde de Villamediana y el cé
lebre don Francisco de Quevedo y Vi Los poetas populares compusieron
llegas, con sus mordaces y picantes romances que se vendian públicamente
sátiras habian sido los que mas habian en las calles, y todo respiraba respeto
contribuido á la terrible catástrofe de y consideracion al desgraciado mar
don Rodrigo, destrozando su reputa qués de Siete Iglesias. Era tan fuerte
cion, y popularizando su descrédito. la opinion popular que todo lo arrolla
Estos hombres tan célebres en las le ante la cual se estrella el poder de
tras como avezados en la intriga, con os mismos reyes y la autoridad de
sagraron su pluma, arrastrados por la los ministros, aunque sean de un rey
verdad y la opinion pública, á llorar absoluto, que el dia 2 , de diciembre
las desgracias de su víctima. Y es que siguiente, es decir, á los cuarenta y
ante el sepulcro enmudece la envidia un dias del trágico suceso, se celebra
y todos los odios callan!!.... ron en la iglesia del Cármen con toda
El conde de Villamediana compuso solemnidad sus exequias fúnebres
á la muerte de don Rodrigo, y se leyó asistiendo á ellas toda la grandeza,
en la córte con no menor avidez que todos los títulos y lo mas notable de
se habian leido antes sus sátiras, el si la córte de las Españas. Sobre la tum
guiente ba que se hallaba en medio de la igle
SONETO. sia, se colocó la insignia de la cruz roja
de Santiago, aquella cruz que no se
Este que en la fortuna mas crecida le habia permitido llevar al cadalso!!!
No cupo en sí, ni cupo en él la suerte, Tanta y tan poderosa era la fuerza
Viviendo, pareció digno de muerte, de la opinion pública, que se habia
Muriendo, pareció digno de vida. obrado en el ánimo del pueblo y en
Oh Providencia nunca comprendida, el de casi todas las gentes una reaccion
Auxilio superior, aviso fuerte; verdadera sobre el proceso de don
El humo en que el aplauso se convierte Rodrigo Calderon, mirándolo todos no
Hace la mesma afrenta esclarecida. como un acto de iusticia sino como una
Calificó un cuchillo los perfectos venganza terrible de sus contrarios y
Medios que religion celante ordena muy particularmente del conde-duque
Para ascender á la mayor victoria, de Olivares, que con tanta perseve
Y trocando las causas sus efectos, rancia como disimulo en el anterior
Si glorias le conducen á la pena reinado habia procurado minar su
Penas le restituyen á la gloria! poder.
Los romances que públicamente
Don Francisco de Quevedo, aban se vendian en las calles, y de que ha
donando su festivo genio, tambien con quedado una variada coleccion mante
432 CAUSAS CELEBRES.
= -,

nian vivo el espíritu del pueblo. (1) en aquella época de supersticion, y


No se descuidaba por su parte el clero, de ignorancia , en propalar especies
tan poderoso para con el vulgo, y mas que creidas , como artículos de fé por
salir de su boca hacian mirar al que
(1) SUPLICIO DE DON RODRIGO CALDERON. habia muerto en el patíbulo como un
martir. º
Anónimo. En comprobacion de esto refieren
los escritos de aquella época que en el
Si el penoso y triste llanto convento de la Merced de Madrid, con
A la suspension da treguas,
De un desdichado marqués vento que despues ha derribado la re
0ireis la infeliz tragedia. volucion y que forma hoy lo que se
Acusaciones vulgares llama la Plaza del Progreso, en el
Sus delitos manifiestan, que habia labrado don Rodrigo Cal
Presagios de su fortuna deron la capilla mayor, de la que era
Y hijos de su soberbia. patrono, estando á las doce del dia
El vulgo vario dudoso
lia dado contrarias nuevas 21 de octubre, dia de su muerte, cele
Acreditando mentiras brándose misas por su alma, al cele
Y autorizando sospechas. brarse la última que fué cantada por el
Llegó pues el triste dia comendador del convento, religioso
De la ejecucion molesta,
A donde la admiracion
Quedó de sí satisfecha, Debajo tales banderas.
Para cuya prevencion Cuatro pregoneros luego
La plaza Mayor despejan, En alta voz manifiestan
Y va el funesto cadalso Alternative, las culpas
Fabrican en medio d'ella: Que al suplicio le cóndenan.
En él una tosca silla Por muertes y alevosías
De las del marqués diversa, Publica el pregon que muera
Tanto en la fábrica humilde Degollado un hombre triste
Como en la altura soberbia; A quien mató su soberbia.
No la cubrieron de luto, Con ánimo valeroso,
Que no están siempre cubiertas Si en morir hay quien lo tenga
De honor las pompas del mundo Las gradas penosas sube:
A los que se adorñan d'ellas. Y en lo mas alto contempla
La soberbia plaza y calles De la mudable fortuna
El confuso vulgo llena, La poco segura rueda.
Del suceso portentoso Exhórtale el confesor
Comentando la sentencia. A l -stial carrera,
No quedó torre ó balcon, Col. ..e el mísero paciente
Terrado, ventana ó puerta, Muestra contricion inmensa;
Que del caso ¿ Y para mejor pasar
La pesadumbre no sienta. El amargo trago, ruega
Entre las once y las doce Al carmelitano padre
Sacan al de Siete Iglesias Le oiga de penitencia.
De su casa regaladó, Hízolo, y humildemente
Ya hecha cárcel horrenda. Postrado pecho por tierra
En una enlutada mula Recibió la absolucion
Subió con accion severa, Porque le dé gloria eterna,
Con caperuza y capuz Con ánimo valeroso
En vez de la cruz bermeja; Tomó la silla funesta
Cabello y barba crecida, A donde el fiero verdugo
Saco, ya que su imprudencia Le ligó brazos y piernas.
Dejó de la ocasion calva Al dichoso desdichado
La mal segura melena. Cubre de una banda negra
Un cristo crucificado Los ojos, y desenlaza -

Puesto en sus manos contempla Del cuello las blancas trenzas


Con gran devocion, sacando Las altiveces mundanas
Del vulgo lágrimas tiernas. Muestran su vana potencia
Grande guardia de alguaciles Ayer mandándolo todo,
De la casa y córte lleva, Y hoy á un verdugo lºs,
Diferente con pañía Pendientes estaban todos,
Que le hacia la tu desca. La respiracion suspensa,
. La Paz y Misericordia, Hasta que la vil cuchilla
Ambas cofradías lleva, . Se vió de sangre cubierta.
Con que pretende victoria (Códice del siglo XVII.)
*.

DON RODRIGO CALDERON. 433

muy virtuoso, en aquella misma hora tuvo que pagar la complacencia que con
en que le estaban quitando la vida él tuvieron los jueces. Don Francisco
á don Rodrigo Calderon, aseguró á mu de Contreras, fué nombrado presiden
chísimas personas con bastante asom te del Consejo de Castilla: aquel ambi
bro y admiracion, que todas las veces cioso magistrado llegó por fin, aunque
ue se dirigia al p blo para decir el por breve tiempo, al término que se
ominus vobiscum y el orate fratres, á habia propuesto; ocupó la plaza que en
pesar de que celebraba de requiem, vano habia solicitado en el anterior
cuando se volvia al altar siempre halló reinado. Pronto la muerte le despojó
registradas misas de diferentes márti de él.
res, y una de ellas fué la de San Juan El rey, , no obstante la oposicion
Bautista, lo que asi testificaron el diá— del conde-duque de Olivares, nombró
cono y el subdiácono. para sucederle al cardenal de Trejo, á
No se necesitaba mas para aumen quien poco despues de la muerte de su
tar la compasion al desgraciado reo, y tio don Rodrigo Calderon habia nombra
la animadversion hácia el ministro do el Papa para el obispado de Málaga.
conde-duque de Olivares á quien se El cardenal de Trejo era un hombre de
atribuia, y con gran fundamento, el ha tan reconocido mérito que no obstante
ber preparado y dispuesto su ejecu— los vínculos que le unian con la familia
C10I). del desgraciado don Rodrigo Calderon
La injusticia del suplicio de don fué elevado á este puesto, el mas emi
Rodrigo Calderon era una idea corrien nente de la magistratura española.
te, comun, aun entre las personas de El cardenal de Trejo, como presi
mas elevada categoría. Don Alonso de dente del Consejo de Castilla era un ri
la Cueva, letrado de grandísima opi val temible para el conde-duque de
nion, que murió de fiscal del Consejo Olivares. Era costumbre, que se ha
supremo de Indias dijo á una persona conservado hasta la estincion de este
principal de la córte, que si los delitos supremo tribunal, el que todos los
del marqués de Siete Iglesias los hubie viernes los presidentes, despues de la
se cometido un hombre comun y ordi consulta ordinaria que el Consejo hacia
nario, se comprometia con muy poco al rey, se encerrasen con él, y solos,
trabajo á haberle hecho dar por libre. sentado el presidente en un banco
Hablando un dia el conde-duque de de madera hablase al rey con toda
Olivares con García Perez de Araciel, libertad sobre los negocios mas prin
cuyo nombre no poden "ºscribir sin cipales del reino, ó sobre lo que creye
marcada repugnancia por"aber visto se digno de llamar su atencion.
la contradicción de sus opiniones y la El cardenal de Trejo se hizo un dia
variedad de sus juicios como juriscon el intérprete del clamor público: le
sulto, cambiando al lado del viento que contó el infelicísimo estado en que se
soplaba en la córte, tratando sobre la hallaban las cosas de España, y que se
causa del marqués de Siete Iglesias le iban poniendo cada dia de peor condi
dijo el conde-duque, despues de haber cion, no pudiendo él hacer nada para su
discurrido sobre lo mal que habia sido remedio sino le daba su apoyo y pro
recibido , el éxito de ella por la opi teccion el rey.
nion pública: que sin duda los jueces mo Felipe IV, tuvo la debilidad de re
debieron perdonarle nada, el fiscal res ferir al conde-duque de Olivares todo
pondió entonces: «Hícele de tal mane cuanto habia pasado; la conferencia que
ra el proceso que quedará aquel pleito habia tenido en el rato que en el ban
para ejemplo de otros (1).» quillo le habia hablado el presidente del
Y no mentia el venal magistrado, Consejo de Castilla, y el ministro que te
porque este proceso es un padron de mia que la voz de aquel respetable pre
ignominia de la jurisprudencia de lado revestido con la púrpura romana
aquella época! pudiese llamar la atencion de aquel rey
El ministro habia sido complacido: á quien él tenia distraido con continuos
festines, Saraos, y amoríos, mientras
(1) Manuscrito de la Academia de la His iba pedazo á pedazo cayéndose la anti
toria. gua poderoea monarquía española, co
434 CAUSAS CELEBRES.

"enzó á buscar medios en que pudiese duque de Lerma y del marqués de Sie
tropezar y caer el austero, presidente te Iglesias, captándose el afecto del
de Castilla, hombre á quien no podia conde-duque de Olivares.
calumniar, porque su ¿ y su con Redobló sus instancias en tanto gra
ducta eran intachables. do que el general de la órden de San
Comenzó á hacer cundir la voz por Francisco, fray Bernardino de Serra,
la córte de que iba á ser destituido el que se hallaba en Madrid, irritado de
cardenal de su eminente puesto. El car la fuerza de sus instancias, y del favor
denal que nada temia, que se sentia que se le dispensaba por el ministerio,
fuerte en su conciencia y en la verdad fué á San Gil, y sentándose en la pieza
con que habia hablado al rey, quiso capitular del convento convocó á los
probar el grado de firmeza en que se frailes mandando que le trajesen alli de
hallaba. Se avistó con el rey; le refirió lante á fray Juan de Santa María para
lo que se decia de público, y solicitó reprenderle y castigarle.
licencia para restituirse á Málaga, de Fueron á llamarle á su celda; die
donde era obispo. ron muchos golpes; derribaron la puer
Felipe IV, le oyó en silencio, no le ta y encontraron al fraile muerto.
respondió ni una palabra, empero ape Asombrado quedó el convento con se
nas habian pasado algunas horas que mejante espectáculo, y el general muy
se habia retirado de su presencia, satisfecho, creyendo y reputándose en
cuando le mandó á su morada una tonces que el mismo cielo habia veni
carta órden para que se fuese de Ma do á contribuir al castigo de su ambi
drid, nombrando por presidente del cion, y sobre todo de las malas artes
Consejo de Castilla, al obispo de Sol con que habia procurado la ruina del
S0Ild. marqués de Siete Iglesias que pocos
El cardenal Trejo, tomó el camino meses antes habia espirado en la plaza
para restituirse á su diócesis; empero Mayor de Madrid.
aquel hombre que habia resistido los El dia 22 de octubre, dia siguiente
pesares que le había causado la muerte al en que se habia ejecutado la senten
de su bienhechor don Rodrigo Calde cia de muerte de don Rodrigo, sus
ron, y el estado de ruina en que veia enemigos, que no se contentaban con
constituida á su familia, no pudo resis perseguirle hasta el sepulcro, y á quie
- tir el golpe que le habia dado el enemi nes habian irritado las grandes de
de ella: víctima de una gran melanco mostraciones que el pueblo habia he
lía, murió antes de llegar á Málaga (1). cho en su favor, quisieron consumar su
Los enemigos de don Rodrigo Cal obra haciendo que de la opulencia en
deron habian triunfado; pero debian que debieron de quedar sus hijos, se
tener todos un fin funesto. redujesen á tal pobreza, que tan solo
Don Francisco Contreras apenas recibieron en herencia 23,000 reales, es
llega á la presidencia del Consejo de decir, los 2,000 ducados de que el rey
Castilla, cuando viejo, cascado por las le concedió testar únicamente. Seve
enfermedades y los disgustos, fallece ridad inaudita, castigo cruel para unos
inesperadamente. La intrigante mon niños que no eran responsables de las
ja priora del convento de la Encarna faltas de su padre! El dia 22 de octu
cion, Sor Mariana de San José, muere bre se libró, pues, mandamiento de
tambien en su monasterio, olvidada del ejecucion contra los bienes de don Ro
nuevo rey, que no buscaba el trato de drigo, por 2.604,934 maravedises de
religiosas como su piadoso padre, sino costas (76,615 reales): igual ejecucion
el de los poetas y las cómicas. por las condenaciones aplicadas á S. M.
El ambicioso fray Juan de Santa que importaron 727,708 maravedises
María tornó á suscitar sus pretensiones (21,403 reales). Ademas las joyas y fin
creyendo mas seguro su éxito por cas que tenia se aplicaron á la real
haberse afiliado y ser uno de los que hacienda, las cuales ascendieron á
mas habian contribuido á la caida del 1.000,840 ducados: las alhajas que sa
lieron en almoneda pública por la ha
(1) Manuscrito de la real Academia de la cienda el 23 de noviembre de 1621
Historia. F. 333. fueron tasadas en 700,700 ducados.
DON RODRIGO CALDERON 435
-->

La casa en que vivia, calle ancha de de su privanza la nacion española se


San Bernardo, que es hoy el número 28, halló oprimida con impuestos escesi
era de su propiedad, y ésta, unida con vos, yaciendo en un mortal letargo
los coches y mulas de su caballeriza mientras la córte brillaba con inaudito
fueron tasadas en 264,700 ducados. lujo, y los bailes, los festines y las di
De modo que el total confisco de sus versiones se sucedian sin interrupcion
bienes importó 4.966,240 ducados, esto en el palacio del Buen-Retiro.
es 21.628,640 reales. A ciento diez y seis millones de
Al cabo de algunos años la misma doblones de oro, dice el célebre histo
fuerza de la opinion pública que iba riador don Modesto Lafuente, que su
rehabilitando la memoria de don Ro bió lo que sacó de los pueblos en do
drigo Calderon, hizo que se despacha nativos é impuestos estraordinarios,
se favorablemente la peticion de sus de los cuales gran parte se disipó en
hijos para que se les devolviesen los fiestas, banquetes y saraos, y entre
bienes que no habian sido vendidos comediantes y toreros, parte se desti
or no haber encontrado comprador ó naba á malpagar ejércitos que eran
¿ reservado el rey para uso del derrotados y navíos que se perdian,
Estado ó de su erario, como sucedió con pues solo de estos se calcula haberse
las casas llamadas de las Aldabas en perdido mas de doscientos y ochenta
Valladolid y el magnífico convento de entre el Océano y el Mediterráneo du
Portaceli, que era de su propiedad. rante su funesta administracion. Agre
Sin duda hubiera tal vez sido reha gando á estas pérdidas las de las pro
bilitada legalmente la memoria de don vincias y reinos, la del ducado de Mán
Rodrigo Calderon, como lo fué á peticion tua, la de casi toda la Borgoña, la del
de sus parientes la del condestable don Rosellon y la del reino de Portugal con
Alvaro de Luna, sino hubiera confesado sus inmensas posesiones de Oriente,
ser el autor de un asesinato, el de Fran con razon aplicaba la malicia á la gran -
cisco Juara. deza de Felipe IV el simil de la gran
En posesion sus hijos de los bienes deza del hoyo. Soñó el de Olivares en
que habian quedado sin vender de su hacerle señor de otros reinos, y le
padre y del convento de Portaceli, hi faltó poco para hacerle perder todos
cieron trasladar el cuerpo de don Ro los suyos.
drigo á una bóveda de la capilla mayor Atribuia la España todas sus des
de aquel monasterio, que en los tiempos gracias á Olivares y la reina, y los
de su prosperidad habia levantado con grandes se unieron para pedir al re y
gran magnificencia. su destitucion que obtuvieron al cabo
Alli existe todavía en una urna el desterrándole á Loeches y permitién
cadáver, que nosotros hemos visto y dole á pocos dias despues pasará Toro,
que se conserva entero, sin corrupcion donde todavía le persiguió por mas de
alguna, acartonado, en estado de per dos años el encono de sus enemigos que
fecta momia sin mas lesion que la se trataban de renovar en aquel ministro
ñal de la degolladura, á pesar de los caido el trágico y sangriento fin de
doscientos treinta y ocho años que han don Alvaro de Luna y de don Rodrigo
trascurrido desde que se verificó su Calderon.
muerte. A punto estuvieron de conseguirlo
Las monjas lo conservan con un re porque el rey le escribió una carta en
ligioso respeto y con grande aprecio, que se leia el siguiente párrafo. En fin,
como el patron y fundador de su con— conde, yo he de reinar y mi hijo se ha de
vento: lo enseñan á muchas personas coronar en Aragon, y no es esto muy fá
ensalzando sus virtudes y buenas cua cil sino entrego vuestra cabeza á mis va
lidades, única parte de su historia que sallos que á una voz la piden todos y es
por tradicion ha llegado á las monjas. preciso no disgustarlos mas. Esta carta
A los veinte y dos años de la muer fué para él la espada del verdugo. A
te de don Rodrigo Calderon estuvo á los diez dias habia bajado al sepulcro
punto de sufrir igual terrible suerte su 22 de julio de 1643) trastornado el
implacable perseguidor el conde-duque juicio y víctima de una fiebre cere
de Olivares. En los veinte y dos años bral.
-

436 CAUSAS CELEBRES.

Nuestros lectores habrán observa en la esposicion de pinturas de París


do esta coincidencia providencial; to obtuvo el primer premio, y despues
dos los enemigos de don Rodrigo Cal fué admirado en España en la esposi
deron murieron en la desgracia, el du cion de la Academia de San Fernando.
que de Uceda, el padre Aliaga confe Este cuadro magnífico fué comprado
sor del rey, el franciscano fray Juan de por S.M. la reina doña Cristina, gober
Santa María, el célebre asesor de la nadora del reino durante la menor
priora de la Encarnacion y el conde-du edad de su hija doña Isabel II. Este
que de Olivares!!! cuadro de grande y terrible efecto ha
En un manuscrito de la Biblioteca estado por mucho tiempo colocado en
nacional que muy detenidamente hemos la cámara real.
consultado para escribir esta impor Alli es donde los ministros aguar
tante y célebre causa, hemos leido esta dan para entrar al despacho de los
singular observacion que tal vez habrán asuntos del Estado con la reina.—Allí
hecho en el discurso de esta causa mu pasan esperando muchas veces algunas
chos de nuestros lectores. «Es cosa no horas. -

table que todos los sucesos de esta cau ¿Importunaria á los ministros la co
sa fueron en martes: porque en martes locacion de este magnífico cuadro que
salió don Rodrigo de Madrid para Va encierra tan terrible leccion de la res
lladolid; prendióle alli en martes don ponsabilidad ministerial en una época
Fernando Fariñas; en martes entró en en que nada se hablaba de ella, ahora
la fortaleza de Montanches; trajéronle que estos son los verdaderos reyes del
en martes al castillo de San Torcaz, y pais á pretesto de una responsabili
entró preso en martes en su casa; en dad de que todos hablan, que se halla
martes le tomaron la confesion; en mar consignada en todas las constituciones
tes le dieron tormento, y en martes le y que nadie se acuerda de exigirles?
leyeron la sentencia de muerte.» Lo cierto es que hace algunos años
Uno de los mas célebres pintores de ¿ el cuadro del suplicio de don Ro
nuestra época, y del que puede estar rigo Calderon ha sido trasladado á
orgullosa la España, don Cárlos Luis otra parte del Real palacio.
de Rivera, pintó en 1830 un magnífico Nada hay mas molesto y repugnan
cuadro de este pasage histórico repre te para el pecador, dicen los santos pa
sentando á don Rodrigo Calderon cuan dres, que el recuerdo de la muerte!!!
do le llevaban al suplicio, cuadro que
INDICE. -

Don Alvaro de Luna (1453). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .


Don Antonio de Acuña, obispo de Zamora (1526)... . . . . . . . . . . . .
El príncipe de Asturias don Cárlos (1558). . . . . . . . . • • •

Antonio Perez, ministro de Felipe II (1578).. . . . . . . . . . . . . . .. .


Flores de Montmorency, señor de Montigny, caballero del Toison de
oro (1570)... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El fingido rey de Portugal, Gabriel de Espinosa, pastelero de Madri
gal (1594)... . . . . . . . . . . . . a - º * - º * - « • • • • • • • • • •

Don Martin de Acuña, comendador de Santiago, capitan de arcaibuceros


de á caballo del rey Felipe II (1585). . . . . . . . . . . . . . . . .. . .
Don Rodrigo Calderoñ, Conde de la Oliva, Marqués de Siete Iglesias, se
cretario de Estado de Felipe III (1621) • • • - - - • - - - • - • - • • • *
Waltes

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