Antropología Filosófica 24/05/2018 John Alexander Castro ¿es necesario el hombre para hablar de mundo?
Partamos de la afirmación central de este escrito, el mundo puede existir sin el
hombre, eso es innegable, en un orden científico es clara tal afirmación, en el orden de la evolución, la cual no podríamos negar, no se necesito la mano humana, para determinar o hablar de mundo. Ahora bien podría proponer dos posturas desde las cuales se podría asumir la anterior afirmación, o en otro caso negarla, esto es, claro está, desde distintos puntos de vista. Por una arte planteémonos un orden natural de movimiento evolucionista, la misma naturaleza posee su manera de comportarse y definirse a si misma, ella guarda memoria de lo ocurrido, hasta los mismos animales se basan en tales datos para comportarse de una manera u otra, la sabiduría de la naturaleza no es ajena a ella misma, se rebasa en comportamientos que hacen que en conjunto se responda a los mismos para mantener una armonía, un orden; es decir, en el caso de una erupción, esta totalmente comprobado que todos los animales instintivamente huyen del lugar cercano al fenómeno y se refugian en lugares seguros. Por otro lado, podríamos abarcar la negación de la afirmación, mediante la significación que se le da al mundo al día de hoy. Para ello debemos iniciar tal negación desde el mismo hombre, revisando el puesto que ha dado al mundo en el trascurso de la historia. Desde un inicio el mundo ha sido el escenario desde donde el hombre a buscado respuestas a su propia existencia, contemplemos a los presocráticos, ellos comprendieron la realidad a partir de la naturaleza, buscaron el principio de todo desde lo elemental que provee el mundo. Pues bien, de ahí en adelante se torna interesante la creación de nuevos mundos como es el caso de Platón y su mundo ideal, pasando luego por Santo Tomás y su determinación de creación, llegando luego a descartes y su exaltación del yo, por último, encontramos a Leibniz con el mejor mundo posible. Total, todo intento desde el hombre de determinar el mundo a mi parecer es pura especulación, verdades que mutan con el paso de los tiempos, el mundo se transforma y posee su propia voluntad, de modo que el hombre no es necesario para hablar de mundo, en sentido estricto, ya lo que surja del hombre como definiciones del mundo ha de ser un pequeño aporte a lo que es el mundo en si mismo. Somos pequeñas partículas ante la grandeza de la sabiduría natural, por mas que creamos lograr definir el mundo, en un abrir y cerrar de ojos el mundo puede terminar con aquello que habíamos creído como verdad.