Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Apoyo:
Mayo de 2007
Nota
Gestión de
Inundaciones Urbanas
_________________________
Carlos E. M. Tucci
90690-370 Rua Lavradio, 150 cl - Porto Alegre-RS -Brasil
Tel: (051) 33347604 • tucci@portoweb.com.br
Marzo de 2006
PRESENTACIÓN
ste texto fue preparado como base para un curso del mismo
E título dirigido a tomadores de decisión, profesionales de
distintas áreas y conocimientos, que actúan dentro del medio
ambiente urbano como administradores, legisladores, ingenieros,
arquitectos, geólogos, biólogos, entre otros. El objetivo del curso
es presentar una visión integradora de la gestión de las aguas
pluviales urbanas, donde se insertan el drenaje urbano y las
inundaciones ribereñas de las ciudades. El curso no aborda los
aspectos específicos del proyecto, pero trata de abordar los
aspectos estratégicos de la gestión y las interfaces con los distintos
aspectos de aguas urbanas y los demás elementos de planeamiento
y gestión de las ciudades.
Este curso fue dictado inicialmente en Brasil y después en
varias ciudades de América del Sur en cooperación con diversas
entidades nacionales e internacionales, intentando cambiar la
manera insustentable del desarrollo urbano y sus impactos en el
ámbito de las aguas pluviales.
El primer capítulo presenta aspectos generales del
desarrollo urbano y la identificación de los dos tipos principales
de inundaciones: debido a la urbanización (o por el drenaje
urbano) y ribereñas. El segundo capítulo trata de este último tipo
de inundaciones, sus evaluaciones, las medidas de control para la
mitigación de los impactos y su gestión dentro de las ciudades. En
el tercer capítulo se presentan los principales aspectos de la
gestión en el drenaje urbano tales como las estrategias de control
y sus principios y las medidas de control sustentables para
diferentes oportunidades. En el cuarto capítulo se presentan los
distintos aspectos de la gestión integradora en el ambiente urbano,
sus interrelaciones e interfaces. En el quinto capítulo son
presentados los elementos del Plan Urbano de Aguas Pluviales y
su relación con los demás elementos de la infraestructura urbana y
el Plan de la Cuenca Hidrográfica. En el sexto capítulo son
presentados estudios de casos de conflictos y de gestión.
Seguramente el contenido de este texto no abarca todos los
aspectos del tema ya que el mismo es muy amplio y abarca
diferentes realidades económicas, sociales, ambientales y
climáticas, pero muestra cómo incluir soluciones innovadoras
basadas en principios fundamentales del desarrollo sustentable.
2
3
Índice
1. AGUAS URBANAS 8
4
2.7.2 Método de la curva de perjuicio histórico............................. 80
2.7.3 Ecuación del perjuicio agregado ............................................. 81
5
5.3.2 Medidas estructurales..........................................................160
6
7
1. Aguas Urbanas
Visión integradora de los aspectos de la infraestructura que
posee relación con las inundaciones urbanas
8
1.1 Desarrollo urbano
1.1.1 Proceso de urbanización
El crecimiento urbano en los países en desarrollo ha sido
realizado de manera insustentable con deterioro de la calidad de
vida y del medio ambiente. Este proceso es todavía más
significativo en América Latina donde 77% de la población es
urbana (47,2% a nivel mundial). Existen 44 ciudades en América
Latina con población superior a 1 millón de habitantes (de un total
de 388 ciudades del mundo, UN, 2003). Cerca de 16 mega-
ciudades (superiores a 10 millones de habitantes) se formaron en
el fin del Siglo XX, lo que representa 4% de la población mundial,
y por lo menos cuatro de estas ciudades están en América Latina
(Tabla 1.1), lo cual representa más del 10% de la población de la
región.
El crecimiento urbano ocurrido en países en desarrollo ha
sido significativo desde la década de los 70. En los países
desarrollados el crecimiento de la población se estacionó y tiende
a disminuir ya que la tasa de natalidad es inferior a 2,1 hijos por
matrimonio, manteniéndose así la población estable. La
recuperación o el mantenimiento de la población actual ocurre
solamente a través de la migración controlada. En los países en
desarrollo el crecimiento es aún muy importante y la proyección
de las Naciones Unidas es que la estabilización de la población
ocurrirá solamente en el año 2150. La urbanización es un proceso
que ocurre a nivel mundial con diferencias entre los continentes.
En América Latina la urbanización ha sido alta con la
transferencia de la población rural hacia las ciudades. Este
proceso tiende a medio plazo estabilizar el crecimiento
demográfico. Se presume que cerca del año 2010 existirán 60
ciudades con más de 5 millones de habitantes, y la mayoría de
éstas estarán ubicadas en los países en desarrollo. En la tabla 1.1
se puede observar las ciudades más pobladas del mundo y de
América Latina.
La tasa de crecimiento de la población de América Latina
y el Caribe variaron de 2,1% en los primeros cinco años de la
década de los 80 para 1,5% en los primeros cinco años del nuevo
milenio y la tendencia es de 1,2 para el año 2015. Esto es el
reflejo del proceso de urbanización que tiende a reducir la tasa de
crecimiento habitacional.
Tabla 1.1. Mayores ciudades a nivel mundial y de América Latina (UN, 2003)
Mayores a nivel mundial Mayores ciudades de América
9
Latina
Población Población
Ciudad Millones Ciudad Millones
Tokio 26,44 Ciudad de México 17,8
Ciudad de México 18,07 San Pablo 16,3
San Pablo 17,96 Buenos Aires 12,02
Bombai 16,09 Rio de Janeiro 10,65
Los Ángeles 13,21 Lima 7,44
Calcuta 13,06 Bogotá 6,77
Shangai 12,89 Santiago de Chile 5,47
Daka 12,52 Belo Horizonte 4,22
Deli 12,44 Porto Alegre 3,76
90%
80%
70%
% Población Urbana
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
1985 1990 1995 2000 2005 2010 2015
años
100%
% de Población Urbana
80%
60%
40%
20%
0%
1000 10000 100000 1000000
1000, habitantes
11
1.1.2 Impactos en la infraestructura urbana
Los principales problemas relacionados con la
infraestructura y la urbanización en los países en desarrollo, con
especial destaque para América Latina son:
• Gran concentración de población en pequeñas áreas,
con deficiencia en el sistema de transporte, falta de
abastecimiento y saneamiento, aire y agua
contaminados, además de las inundaciones. Estas
condiciones ambientales inadecuadas son las
principales limitaciones a su desarrollo porque
reducen las condiciones de salud y la calidad de
vida de la población y producen serios impactos
ambientales;
• Aumento de la periferia de las ciudades de manera
descontrolada por el éxodo rural que migra hacia las
grandes ciudades en búsqueda de empleo. Estos barrios
generalmente están desprovistos de seguridad, de
infraestructura tradicional de agua, cloacas, drenaje,
transporte y colecta de residuos sólidos y son
dominados por grupos de delincuentes generalmente
ligados al tráfico de drogas.
• La urbanización es espontánea y el planeamiento
urbano es realizado en la ciudad ocupada por
población de renta media y alta. Sin haber un
planeamiento del espacio, la ocupación ocurre sobre
áreas de riesgo de inundaciones y de deslizamientos,
con frecuentes muertes durante el período de lluvias.
Sólo en el mes de enero de 2004, 84 personas
murieron en Brasil debido a eventos relacionados
con inundaciones. Parte importante de la
población vive en algún tipo de villa de
emergencia. Por lo tanto, existe la ciudad formal y
la ciudad informal. La gestión urbana
generalmente abarca sólo la primera, o sea, la
ciudad formal.
Los problemas de urbanización ocurren por causa de uno o
más factores a lo largo del tiempo y éstos se han incrementado en
las últimas décadas. Algunos de los factores son:
• Las poblaciones que migran hacia las ciudades
generalmente son de baja renta y no poseen
capacidad de inversión y tienden a invadir áreas
públicas o comprar áreas precarias sin
infraestructura y de urbanización informal. Entre
éstas se localizan las áreas de riesgo de inundación
12
o deslizamiento;
• el déficit de empleo, de renta y de vivienda es
alto;
• legislaciones equivocadas de control del espacio
urbano;
• incapacidad del municipio de planificar y anticipar
la urbanización y de invertir en planeamiento de
espacios seguros y adecuados como base del
desarrollo urbano;
• crisis económicas en los países.
• El municipio apenas consigue controlar las áreas
de medio y alto valor económico con
reglamentación de uso del suelo, donde está la
ciudad formal.
14
1.2 Sistemas hídricos urbanos
Los principales sistemas relacionados con el agua en el
medio ambiente urbano son:
• manantiales de aguas;
• abastecimiento de agua;
• saneamiento de efluentes cloacales;
• control del drenaje urbano;
• control de inundaciones ribereñas.
Los manantiales de agua urbana son fuentes de agua para
abastecimiento humano, animal e industrial. Estas fuentes pueden
ser superficiales y subterráneas. Los manantiales superficiales
son los ríos próximos a las comunidades. La disponibilidad de
agua en este sistema varía a lo largo de los años; algunas veces la
cantidad de agua disponible no es suficiente para atender la
demanda, siendo necesario frecuentemente la construcción de un
reservorio que garantice la disponibilidad hídrica a la comunidad a
lo largo del tiempo. Los manantiales subterráneos son los
acuíferos que almacenan agua en el subsuelo y permiten atender
la demanda a través del bombeo de esta agua. De esta manera, el
agua subterránea es utilizada generalmente en las ciudades de
pequeño y medio porte, pues depende del caudal de bombeo que
el acuífero permite retirar sin comprometer su balance de entrada
y salida del agua.
El abastecimiento de agua involucra la utilización del agua
disponible en el manantial, que es transportada hasta la estación
de tratamiento de agua (ETA) y después distribuida a la población
a través de una red. Este sistema involucra importantes
inversiones, generalmente públicas, para garantizar el agua en
cantidad y calidad adecuada.
El saneamiento de efluentes cloacales es el sistema de
colecta de los efluentes (residenciales, comerciales e industriales),
el transporte de este volumen, su tratamiento en una estación de
tratamiento y el vertido del agua tratada nuevamente al cuerpo
hídrico.
El drenaje urbano involucra la red de colecta del agua (y
residuos sólidos), que se originan debido a precipitaciones sobre
las superficies urbanas, su tratamiento y retorno a los ríos.
El control de inundaciones ribereñas se hace para evitar
que la población sea alcanzada por las inundaciones naturales. Los
ríos en los períodos de lluvias salen de su lecho menor y ocupan el
lecho mayor, dentro de un proceso natural. Como esto ocurre de
manera irregular a lo largo del tiempo, la población tiende a
15
ocupar el lecho mayor, quedando sujeta al impacto de
inundaciones.
16
Tabla 1.3. Proporción aceptable (“improved”1) - Abastecimiento y saneamiento
de áreas urbanas (WHO y UNICEFJMP, 2002)
Región Abastecimiento de agua2 Saneamiento3
África 86 80
Asia 93 74
América Latina y el 94 86
Caribe
Oceanía 98 86
Europa 100 99
América del Norte 100 100
Global 95 83
1- es una definición cualitativa genérica para el agua ofrecida y dispuesta
sin contaminar la población. No es la misma definición que “safe”,
agua segura, que debería basarse en la medida cuantitativa de
indicadores;
2- Abastecimiento de agua es entendido por los autores como el
suministro de agua a la población;
3- Saneamiento es entendido por los autores como la disposición de
cloacas en redes o en el suelo, no involucra necesariamente la colecta
y el tratamiento.
17
urbano y ambiental, que objetiven la minimización de los
impactos y proporcionen el desarrollo sustentable.
Los riesgos de inundación y el deterioro de la calidad del
agua en los ríos de las ciudades de países en desarrollo y, en
países desarrollados, es un proceso dominante del final del siglo
XX e inicio del siglo XXI. Esto ocurre debido a:
• la contaminación de los manantiales superficiales y
subterráneos con efluentes urbanos como el
escurrimiento cloacal, pluvial y los residuos sólidos;
• la disposición inadecuada de los escurrimientos
cloacales, pluviales y residuos sólidos en las ciudades;
• las inundaciones en áreas urbanas debido a la
urbanización;
• la erosión y sedimentación que genera áreas
degradadas;
• la ocupación de áreas ribereñas, con riesgo de
inundaciones y de áreas de grandes pendientes, como
las laderas urbanas, sujetos a deslizamientos después
del período de lluvias.
La mayoría de estos problemas es consecuencia de una
visión equivocada del control de las aguas pluviales por parte de
la comunidad y de profesionales, que aún priorizan proyectos
centralizados, sin una visión de la cuenca y de los aspectos
sociales e institucionales de las ciudades. La paradoja es que los
países en desarrollo y más pobres, priorizan acciones
económicamente insustentables, como son las medidas
estructurales; mientras que los países desarrollados buscan
prevenir los problemas con medidas no estructurales, más
económicas y con un desarrollo sustentable.
22
Tabla 1.6. Racionalización del Uso del Agua (Scientifical American, 2001)
La ciudad de New York en el inicio de los años 90 tuvo una gran crisis de
abastecimiento de agua y estaba a punto de entrar en un escenario caótico, con
el crecimiento de la población. La ciudad necesitaba más de 90 millones de
galones de agua por día (340 millones de m3), cerca del 7% del uso total de la
ciudad. La alternativa era gastar más de mil millones de dólares para bombear
agua del río Hudson, pero la ciudad optó por la reducción de la demanda.
En 1994, fue iniciado un programa de racionalización, con inversión de U$S
295 millones, para sustituir 1/3 de todas las instalaciones de los baños de la
ciudad. Cada baño utilizaba un dispositivo que consumía cerca de 5 gallones
para descarga, y estos fueron reemplazados por un dispositivo de 1,6 gallones.
En 1997, cuando el programa terminó 1,33 millones de dispositivos fueron
sustituidos en 110.000 edificios con 29% de reducción del consumo de agua
por edificio, reduciendo el consumo de 70 a 90 millones de gallones por día.
23
proyectadas, muchas veces no se prevé la conexión de la
salida de las viviendas o edificios a las mismas. De esta
manera las redes no colectan el flujo cloacal proyectado y
las estaciones no reciben el flujo cloacal de acuerdo a su
capacidad. En este caso, o el proyecto fue elaborado de
manera inadecuada o no fue ejecutado como debería.
• Como la cloaca implica la continuación del escurrimiento
del sistema pluvial para el sistema fluvial el impacto
ambiental continúa alto. La conclusión es que las
inversiones públicas son realizadas de manera inadecuada,
atendiendo apenas a las empresas que ejecutan las obras y
no a la sociedad que aporta los recursos, y tampoco se
tiene en cuenta el medio ambiente que necesita ser
conservado;
• Como una parte importante de las empresas cobra por el
servicio de colecta y tratamiento, mismo sin que el
tratamiento sea realizado, ¿cuál será el interés de estas
empresas en completar la cobertura de colecta y el
tratamiento de los flujos cloacales? Otro escenario
frecuente es el aumento de la colecta sin tratamiento,
agravando el problema a medida que se concentra la
contaminación en los ríos;
• Cuando sea implementado el sistema de cobranza por la
contaminación ¿quién pagará las penas previstas para la
contaminación generada?
• Existe actualmente una discusión sobre la concesión de los
servicios de agua y cloaca en Brasil que ha inmovilizado el
financiamiento y la privatización del sector. La
Constitución Federal dicta que la concesión de los
servicios de agua y cloacas pertenecerá a los municipios,
mientras que las empresas de agua y saneamiento
generalmente quedarían a cargo de órganos provinciales.
Como éstas no detentan la concesión, su valor económico
queda reducido en el mercado de privatización.
Recientemente, el gobierno federal envió un proyecto de
ley al Congreso de la Nación sobre este tema, reavivando la
polémica que involucra enormes conflictos de intereses.
TR = Tc + T1 + Tdr (1.1)
24
donde TR es el total producido por la sociedad y por el
ambiente; Tc es el total colectado; TI es el total de la limpieza
urbana y Tdr es el total que llega en el drenaje. Los dos primeros
volúmenes pueden ser reciclados, disminuyendo el volumen a ser
depositado en el ambiente. A medida que los sistemas de colecta y
limpieza urbana son ineficientes el volumen de Tdr aumenta,
aumentando el costo de retirada, obstrucción al escurrimiento y el
subsidio ambiental recibido por la sociedad que contamina.
En el desarrollo urbano son observadas algunas etapas
distintas de la producción de material sólido en el drenaje urbano
(Tdr), que son las siguientes:
25
California, la basura que llega en el drenaje fue estimado en 1,8kg
/ persona / año. Después de la limpieza de las calles resultan 0,8kg
/ persona / años en la red (Larger et al., 1977). En Brasil este
volumen debe de ser mayor, considerando que muchas veces el
drenaje es utilizado como destino final de residuos sólidos.
En la última década hubo un visible incremento de basura
urbana debido a los embalajes plásticos que poseen bajo reciclaje.
Los ríos y todo el sistema de drenaje quedan llenos de botejas,
además de embalajes de plásticos de todos tipos.
Las principales consecuencias ambientales de la
producción de sedimentos son las siguientes:
27
fiscalizados ya que no precisa realizar licitaciones públicas para
gastarlos. Como la mayoría de las soluciones sustentables pasan
por medidas no estructurales, que involucran restricciones a la
población, difícilmente un intendente buscará este tipo de
solución, porque generalmente la población espera que él realice
una obra. Para implementar las medidas no estructurales, el
gobierno tendría que interferir en intereses de propietarios de
áreas de riesgo, lo que políticamente es complejo en el ámbito
local.
Para modificar este escenario es necesario un programa
en el ámbito provincial (departamental), con vistas a la
educación de la población, además de una acción junto a los
bancos que financian obras en áreas de riesgo.
28
caudal despúes de la urbanización
R=
caudal antes de la urbanización
31
1.5 Enfermedades de vinculación hídrica
Existen muchas enfermedades que se transmiten a través
del agua. Con relación a la transmisión a través del agua, las
enfermedades pueden ser clasificadas de acuerdo con el concepto
de White et al. (1972) y presentado por Prost (1993):
35
Problemas
36
drenaje. Admita que 1,5 y 10% del total de la basura
colectada llega en el drenaje. Admita un costo de 5
centavos de dólar/kg para colectar y disponer de este
volumen. Calcule el valor anual por persona. Este es el
subsidio que la población está recibiendo del medio
ambiente.
Referencias
37
38
39
2.Gestión de
inundaciones
ribereñas
El control de las áreas de riesgo del lecho mayor de los ríos
es fundamental para la gestión de las áreas ribereñas.
40
que la atmósfera terrestre está sujeta. Las condiciones
hidrológicas que producen la inundación pueden ser naturales o
artificiales. Las condiciones naturales son aquellas cuya
ocurrencia es propiciada por la cuenca en su estado natural.
Algunas de esas condiciones son: relieve, tipo de precipitación,
cobertura vegetal, capacidad de drenaje.
Los ríos normalmente drenan en sus cabeceras áreas con
gran desnivel produciendo escurrimiento de alta velocidad. La
variación de nivel durante la creciente puede ser de varios metros
en pocas horas. Cuando el relieve es accidentado las áreas más
propicias a la ocupación del hombre son las planas y más bajas,
justamente aquellas que presentan alto riesgo de inundación.
La terraza de inundación de un río crece significativamente en sus
cursos medio y bajo, donde el desnivel se reduce y aumenta la
incidencia de área planas. Las precipitaciones más intensas
alcanzan áreas localizadas y son en general de tipos convectivo
y orográfico. Estas formas de precipitación actúan, en general,
sobre pequeñas áreas. La precipitación ocurrida en Porto Alegre
el 13 de febrero de 1981, con cerca de 100 mm en 1 hora es un
ejemplo. Las precipitaciones frontales actúan sobre grandes áreas
provocando mayores inundaciones en grandes ríos.
La cobertura vegetal tiene como efecto la interceptación de
parte de la precipitación que puede generar escurrimiento y la
protección del suelo contra la erosión. La pérdida de esta
cobertura para uso agrícola ha producido como consecuencia el
aumento de la frecuencia de inundaciones debido a la falta de
interceptación de la precipitación y a la colmatación de los ríos.
Las condiciones artificiales de la cuenca son aquellas
provocadas por la acción del hombre. Algunos ejemplos son:
obras hidráulicas, urbanización, deforestación, reforestación y uso
agrícola. La cuenca rural posee mayor intercepción vegetal,
mayores áreas permeables (infiltración del suelo), menor
escurrimiento en la superficie del suelo y drenaje más lento. La
cuenca urbana posee superficies impermeables, tales como
tejados, calles y pisos, y produce aceleración en el escurrimiento,
a través de la canalización y del drenaje superficial. Los
resultados de la urbanización sobre el escurrimiento son:
aumento del caudal máximo y del escurrimiento superficial,
reducción del tiempo de pico y disminución del tiempo de base.
La urbanización y la deforestación producen un aumento de la
frecuencia de inundaciones en las crecientes pequeñas y medianas.
En las grandes crecientes su efecto es menor, pues la capacidad de
saturación y almacenamiento del suelo son alcanzadas y el efecto
final difiere poco.
41
2.2 Ocupación del espacio urbano e
impacto de las inundaciones
Las inundaciones son más antiguas que la existencia del
hombre en la tierra. El hombre siempre intentó ubicarse cerca de
los ríos para emplearlos como transporte, obtener agua para su
consumo y para lanzar sus desechos. Las áreas próximas a los ríos
generalmente son planas, propicias para el asentamiento humano,
hecho que motivó su ocupación.
El desarrollo histórico de la utilización de áreas libres
explica los condicionamientos urbanos existentes en nuestros días.
Debido a la gran dificultad de medios de transporte en el
pasado, el río era utilizado como vía principal. Las ciudades se
desarrollan a las orillas de los ríos o en el litoral. Por la propia
experiencia de los antiguos moradores, la población siempre
intentó habitar las zonas más altas donde el río difícilmente
llegaría. Con el crecimiento desordenado y acelerado de las
ciudades, principalmente en la segunda mitad de este siglo, las
áreas de riesgo considerables como lo son las terrazas inundables,
fueron ocupadas, trayendo muchos perjuicios humanos y
materiales.
Los perjuicios ocurren debido la falta de planeamiento del
espacio y de conocimiento del riesgo de las áreas de inundaciones.
La experiencia de gestión de inundaciones ya ocurría hace
millares de años. En el histórico de la Tabla 2.1 se observa que a
3.000 años atrás las personas ya planeaban la ocupación del
espacio de inundación, pero hoy todavía no es una práctica
corriente.
Figura 2.1. Serie histórica del perjuicio anual debido a las inundaciones en los
Estados Unidos en % del PBI (Priscoli, 2001).
2
N. T: Importante industria textil del Estado de Santa Catarina, Brasil.
44
Entre 1959 y 1982 ocurrió apenas una inundación con
riesgo superior a 5 años. Este período fue justamente el
de mayor crecimiento económico y expansión de las
ciudades brasileñas. Las crecidas después de 1982
produjeron perjuicios significativos en la comunidad
(Tabla 2.3).
Tabla 2.3. Pérdidas por inundaciones en União da Vitoria y Porto União (ICA,
1995).
Año Perjuicios US$ millones
1982 10.365
1983 78.121
1992 54.582
1993 25.933
46
Figura 2.4. Niveles máximos anuales en Ladário en el Río Paraguay y la media
de los períodos: (a) 1900-1961; (b) 1961-1973; (c) 1973-1991
48
2.3.1 Pronóstico de crecida en tiempo real
Para efectuar el pronóstico de crecida a corto plazo son
necesarios: sistemas de colecta y de transmisión de datos y una
metodología de estimación. Los sistemas son utilizados para
transmitir los datos de precipitación, nivel y caudal durante la
ocurrencia del evento. El proceso de estimación es realizado a
través del uso de modelos matemáticos que representan el
comportamiento de las distintas fases del ciclo hidrológico.
Cuando la crecida alcanza un área habitada es necesario
complementar con un Plan de Defensa Civil, y en el caso de la
operación de reservorios es necesario un sistema de emergencia y
operación.
El pronóstico de niveles de crecidas puede ser realizado
con base en la Figura 2.6: (a) pronóstico de la precipitación; (b)
conocida la precipitación; (c) caudal de aguas arriba; (d)
combinación de los dos últimos. En el primer caso es necesario
estimar la precipitación que caerá sobre la cuenca a través del uso
de equipos como el radar o el uso de sensores remotos. A
continuación, conocida la precipitación sobre la cuenca, es posible
estimar el caudal y el nivel por medio de un modelo matemático
que simule la transformación de precipitación en caudal.
El pronóstico, cuando es conocida la precipitación en la
cuenca, utiliza una red telemétrica de colecta y transmisión de
datos (cabe consignar que en el caso anterior esta red no es
dispensable) y el ya citado modelo matemático de transformación
de precipitación en caudal. La antecedencia del pronóstico es
menor en este caso y está limitada al tiempo medio de
desplazamiento de la crecida (Figura 2.6 a). El pronóstico a
corto plazo con base en un puesto de aguas arriba de la sección de
interés depende de las características del río, o sea, del área
controlada de la cuenca. En este caso, el tiempo de antecedencia
es menor que los anteriores (Figura 2.6 b). Cuando la cuenca
intermedia entre los puestos presenta una contribución
significativa, la combinación de los dos procesos anteriores es
utilizada en el pronóstico en tiempo actual (Figura 2.6 c). La
presentación de los modelos de pronóstico en tiempo actual está
fuera del alcance de este libro y puede ser encontrado en la
literatura especializada.
49
Figura 2.6. Pronóstico en tiempo real
1
T= (2.1)
P
50
Para ejemplificar, considere un dado, que tiene seis caras
(números 1 a 6). En una jugada cualquier la probabilidad de salir
el número 4 es p = 1/6 (1 chance en seis posibilidades). El tiempo
de retorno es, en media, el número de jugadas que el número
deseado se repite. En ese caso, usando la ecuación 2.1, queda T =
1/ (1/6)=6. Por lo tanto, en media, el número 4 se repite a cada
seis jugadas. Se sabe que este número no ocurre exactamente a
cada seis jugadas, pero si se juega millares de veces y se obtiene
el promedio, ciertamente ello ocurrirá. Siendo así, el número 4
puede ocurrir dos veces seguidas y pasar muchas sin ocurrir,
pero en la media se repetirá en seis jugadas. Haciendo una
analogía, cada jugada del dado es un año para que ocurren las
crecidas. El tiempo de retorno de 10 años significa que, en media,
la crecida puede repetirse a cada 10 años o en cada año esta
crecida tiene 10% de chance de ocurrir.
Las estimaciones de inundación de un determinado lugar
pueden ser realizadas con base a: (a) serie observada de caudales;
(b) regionalización de caudales; (c) en la precipitación y uso de
modelo lluvia-caudal. Estas metodologías estiman el riesgo de
inundación en el lugar con base en los históricos y consideran que
las series históricas de caudales son:
• Homogéneas o estacionarias, o sea, sus estadísticas no
se alteran con el tiempo. Esto significa que la media de
los caudales o su desvío estándar no se deberían alterar
a lo largo del tiempo. Por ejemplo, al ser construida
una presa aguas arriba de una sección de un río, con
volumen importante para amortiguación de
inundación, el riesgo de la inundación debe cambiar
porque la serie no es más homogénea.
• Las series registradas de niveles de inundación son
representativas de la ocurrencia en el lugar: Pocos
años de datos pueden no ser representativos del riesgo
real de un lugar. En el ejemplo de Blumenau, en el
caso de que fuesen utilizadas series solamente a partir
de 1935, en 1982 el riesgo de una inundación como la
que ocurrió en 1983 habría tenido un riesgo superior a
100 años; sin embargo, si se consideraran los niveles
obtenidos en el siglo XIX y, aún mismo las crecidas de
1983 y 1984, se observaría que su riesgo era, en
realidad, del orden de 30 años;
• Los valores son independientes entre sí. Generalmente
una crecida máxima de un año no guarda dependencia
con el año siguiente si fuera elegida dentro del llamado
“año hidrológico”, que es el período del inicio del mes
51
lluvioso al final del mes seco.
Los dos primeros puntos presentan mayor cantidad de
incertidumbres y la utilización de marcas de inundaciones es
esencial para un ajuste confiable de la curva de probabilidad de
caudales en los lugares de interés. Las metodologías para
determinación de la curva de probabilidad son descriptas en los
libros de hidrología (Tucci, 1993).
52
Un ejemplo de política de gestión de inundaciones ocurrió
en los Estados Unidos. En 1936 fue aprobada una ley en el ámbito
federal, sobre el control de crecidas, que identificaba la naturaleza
pública de los programas de reducción de crecidas y caracterizaba
la implantación de medidas físicas o estructurales como un medio
de reducir estos daños. De esta manera, no era necesario verificar
las relaciones de costo/beneficio para justificar la protección de
las áreas sujetas a inundaciones. Con esto, se aceleró el desarrollo
y la ocupación de las terrazas de inundación, lo cual resultó en el
aumento de los daños ocasionados por las crecidas. Las pérdidas
de los fondos públicos fue insuficiente para atender a esta
tendencia. En 1966, el gobierno reconoció que las medidas
anteriores no eran adecuadas y dio énfasis a medidas no
estructurales, que permitían a la población convivir con la crecida.
El comité creado por la American Society of Civil Engineers
sobre el control de crecidas, relató en 1962 lo siguiente (Task,
1962): “Las limitaciones de la presente (en 1962) Política
Nacional de Control de Crecidas, la cual se basa principalmente
en la construcción de obras de control de inundación, son
reconocidas en este informe, lo cual enfatiza la necesidad de
regulación de las terrazas de inundación como una parte esencial
de un plan racional de reducción de las pérdidas de las crecidas”.
En 1973, fue aprobada una ley sobre protección contra
desastres de crecidas, dando énfasis a medidas no estructurales,
enfatizando y exigiendo el seguro para crecidas y regulación del
uso de la tierra y protección de las nuevas construcciones para
crecidas de 100 años del tiempo de retorno. En 1974 fueron
aprobados, dentro de la Legislación de Desarrollo de Recursos
Hídricos, artículos específicos sobre crecidas que preveían
medidas no estructurales y la distribución de costos, como en el
articulo 73 de la Ley de 1974: “en investigación, planeamiento o
proyecto de cualquier Agencia Federal, o de cualquier proyecto
involucrando la protección contra inundaciones, debe ser dada
prioridad a las alternativas no estructurales para reducción de
perjuicios de inundación, incluyendo, pero no limitando las
construcciones a prueba de crecidas, reglamentación de las áreas
de inundación, utilización de las áreas de inundación para usos
recreativos, pesca, vida animal y otras finalidades públicas y la
transferencia con el objetivo de dar una solución económica,
social y del medio ambiente más aceptable para reducción de los
daños de crecidas”.
En la Figura 2.7 se presenta la evolución de los beneficios
anuales, los beneficios acumulados y las inversiones en la gestión
de inundación hasta 1999 (con valores ajustados al dólar de 1999).
53
Se puede observar en esta figura que los beneficios acumulados
superaron en mucho las inversiones en la gestión de las
inundaciones.
56
hasta que aguas abajo sea alcanzada la cota límite (Qcrit); (b) a
partir de este momento utilizar el volumen del reservorio para
mantener o reducir el caudal (Figura 2.9 b). Estas condiciones
operacionales dependen del proyecto del reservorio y de sus
dispositivos de evacuación. Para la búsqueda de las mejores
condiciones de proyecto y operación es necesario simular el
escurrimiento en el reservorio, identificando cuál es la operación
más eficiente.
Las presas proyectadas deben considerar los impactos que
pueden producir hacia aguas abajo y aguas arriba del
emprendimiento.
Aguas abajo: Generalmente, existen áreas sujetas a inundación
aguas abajo de una presa. Con la construcción de la presa la
tendencia es que el reservorio produzca amortiguamiento de las
crecidas en estas áreas ribereñas, caso no haya problemas
operacionales de la presa. Sin embargo, si el área de aguas abajo
no está ocupada acabará siendo habitada por la proximidad con la
obra, pasando así a estar sujeta a las crecidas. Si la obra no logra
amortiguar las crecidas, la tendencia de la sociedad es que la obra
produzca la reducción de los impactos de aguas abajo. De esta
manera, la restricción de aguas abajo pasa a ser el caudal máximo
Qcrit a partir de lo cual el río inunda sus orillas. En los períodos de
crecidas existirán eventos en que la presa no tendrá condiciones de
amortiguar el caudal y ocurrirán inundaciones. La percepción
pública de esta situación, generalmente, es de culpar la presa por
el ocurrido, por lo tanto, es necesario que el emprendimiento
tenga un eficiente sistema operacional y un sistema de
observación confiable de los datos hidrológicos necesarios a la
demostración de las condiciones operacionales para la defensa de
sus acciones.
57
a. De acuerdo con el caudal afluente, la regla operacional
y la capacidad de escurrimiento, la línea de agua de
remanso puede inundar o provocar represamientos
aguas arriba;
b. las condiciones del ítem anterior pueden alterarse con
el tiempo debido a la colmatación del reservorio, que
ocurre inicialmente en su tramo de aguas arriba.
Debido a esto, los niveles de inundación anteriormente
proyectados pueden aumentar, alcanzando áreas fuera
del límite desapropiado.
Un ejemplo de sistema de presas para el control de
crecidas son los de la cuenca del río Itajaí-Açu en Santa Catarina,
Brasil (Figura 2.10): la presa Oeste ubicada en el río Itajaí-Oeste
aguas arriba de la ciudad de Taió (concluida en 1973), la presa
Sur en el Itajaí do Sul (concluida en 1975) aguas arriba de la
ciudad de Ituporanga; la presa de Ibirama en el río Hercílio
(concluida en el final de los años 80). Esta última no existía
durante las crecidas de 1983 y 1984. El proyecto de estas presas
utiliza descargadores de fondo con capacidad que tiende a retener
mucho volumen dentro de los reservorios, utilizando un tiempo
muy largo para descargar. La contribución de las dos primeras
presas para el control de la inundación del año 1983 fue
insignificante debido al gran volumen de precipitación que ocurrió
durante 7 días. En el caso de la inundación de 1984, que tuvo
duración de apenas 2 días, la contribución fue mayor. Examinadas
las series de caudales máximos antes y después de la construcción
de las presas se observó un resultado inesperado que fue el
aumento de la media y del desvío estándar de las crecidas para
una de las secciones aguas abajo de una de las presas. Sin
embargo, el resultado de este aumento fue debido también al
aumento de precipitaciones en la cuenca justamente entre los dos
períodos. En la Tabla 2.6, son presentadas algunas estadísticas de
esta comparación. La presa Oeste que no produjo aumento se
mostró más eficiente en la contención de las inundaciones,
mientras que la presa Sur aparentemente no posee volumen y
proyecto adecuado para la reducción significativa de las
inundaciones.
58
Tabla 2.6. Estadísticas antes y después de la construcción de la presa en el río
Itajaí
Estatística Presa Presa Sur Precipitación Precipitación1
3
Oeste m /s Anual mm mm
m3/s
Media
Antes de la presa 292,2 488,5 1309 224,1
Después de la presa 274,5 513,3 1658 291,7
Desvío patrón
Antes 73,2 267,1
Después 56,2 356,6
Período
Antes 1934-1972 1935-1974 1942-1972 1942-1972
Después 1973-1983 1975-1984 1973-1984 1973-1984
1 – precipitación del mes en el cual ocurre la crecida máxima anual.
59
Figura 2.11. Niveles operacionales de una presa.
61
Figura 2.12. Impacto de las construcciones del dique.
64
Figura 2.15. Sistema de previsión y alerta.
65
perjuicios será alcanzada dentro de un horizonte de
tiempo de la previsión. La Defensa Civil y las
administraciones municipales pasan a recibir
regularmente los pronósticos para la ciudad;
3. niveles de emergencia: nivel en el cual ocurren
perjuicios materiales y humanos. La población pasa a
recibir las informaciones. Estas informaciones que
recibe la población son el nivel actual y pronosticado
con anticipación y el intervalo probable de errores
obtenidos a través de los modelos;
CR = CT ± DxDist (2.2)
NR = CR ZR (2.3)
67
denominada preliminar, serían delimitadas con baja precisión las
áreas de inundación con base en mapas topográficos existentes y
marcas de crecidas. En la segunda fase, con la delimitación
aproximada de las áreas de inundación, sería determinada la
topografía más detallada para esta área, juntamente con la
batimetría del río.
68
Los criterios para determinación de la línea de agua y los
niveles de crecida a lo largo de la ciudad son los siguientes:
a. conocida la curva de frecuencia de niveles de
inundación en la sección de la regla limnimétrica,
obtenga los niveles absolutos correspondientes a los
tiempos de retorno deseados;
b. defina las secciones a lo largo del río; Estas secciones
son elegidas con base en las marcas existentes y/o en
los niveles medidos a cada 500 m y 1.000 m;
c. calcule el desnivel de la línea de agua para los distintos
tramos definidos por las secciones referenciadas. El
desnivel es calculado con la distancia medida a lo largo
del río. Se debe tener cuidado cuando existen puentes
y/o calles que obstruyen el escurrimiento;
d. para los niveles calculados en las secciones del puesto,
obtenga las cotas correspondientes para las demás
secciones, utilizando el desnivel de la línea de agua
obtenida.
69
Para esto, la línea de agua es determinada para el
caudal registrado en el puesto fluviométrico y el
nivel correspondiente en el sentido de aguas abajo
hacia aguas arriba. La rugosidad correcta será
aquella cuya línea de agua se aproxime de las
marcas de crecida;
b. conocidas las rugosidades se puede establecer la
línea de agua para los caudales correspondientes a
los distintos tiempos de retorno y, en consecuencia,
elaborar el mapeamiento de las áreas alcanzadas.
Zonificación
La zonificación propiamente dicha es la definición de un
conjunto de reglas para la ocupación de las áreas de mayor riesgo
de inundación, previendo la minimización futura de las pérdidas
materiales y humanas en función de las grandes crecidas. Se
concluye de esto, que la zonificación urbana permitirá un
desarrollo racional de las áreas ribereñas.
La reglamentación del uso de las zonas de inundación se
apoya en mapas con demarcación de áreas de distintos riesgos y
en los criterios de ocupación de éstas, cuanto al uso y a los
aspectos constructivos. Para que esta reglamentación sea utilizada,
beneficiando las comunidades, ésta debe ser integrada a la
legislación municipal sobre loteos (o lotificaciones),
construcciones y habitaciones, a fin de garantizar su observancia.
De este modo, el contenido de este capítulo tiene la finalidad de
servir como base para la reglamentación de la terraza de
inundación, a través de los planes directores urbanos, permitiendo
a los municipios realizar un control efectivo. El Departamento de
Aguas y Energía Eléctrica del Estado de San Pablo (DAEE),
presentó una propuesta para los artículos de la sección de
Recursos Hídricos de las Leyes Orgánicas Municipales del
referido Estado, donde la zonificación era recomendada en los
siguientes términos: “Art. 2o. Cabrá al municipio, en el campo
de los recursos hídricos: IV – proceder a la zonificación de las
áreas sujetas a riesgos de inundaciones, erosión y deslizamientos
de suelo, estableciendo restricciones y prohibiciones al uso,
parcelamiento y la edificación, en las áreas impropias o críticas de
manera a preservar la seguridad y la salud pública”.
El Water Resources Council (1971) definió a la
zonificación como “aquella que involucra la división de
unidades gubernamentales en distritos y la reglamentación dentro
de estos distritos de: a) usos de estructuras y de la tierra; b)
altura y volumen de las estructuras; c) el tamaño de los terrenos
70
y la densidad de uso”. Las características de la zonificación, que
la distingue de otros controles es que la reglamentación varía de
distrito a distrito. Por esta razón, la zonificación puede ser usada
para establecer patrones especiales para uso de la tierra en áreas
sujetas a la inundación. La división en distritos de tierras, a través
de la comunidad es usualmente basada en planes globales de uso,
que orientan el crecimiento de la comunidad.
71
Figura 2.17. Reglamentación de la zona inundable (U.S.Water
Resources Council,1971).
72
el valle de inundación. Como este valor difícilmente
es nulo, se adopta un aumento mínimo aceptado para
el lecho principal. En los Estados Unidos se adoptó
como aumento mínimo igual a un pié o 30,45 cm.
Vea la Figura 2.18 para la definición de esta faja de
la terraza.
75
k. protección de equipos fijos;
l. anclaje de paredes contra deslizamientos.
La decisión sobre la obligatoriedad de protección de las
nuevas construcciones en la zona de inundación es un proceso que
debe pasar por una discusión amplia de la comunidad involucrada.
Por lo tanto, se debe tener presente que, luego de las últimas
crecidas, hubo desvalorización inmobiliaria de las áreas de riesgo.
Con el pasar del tiempo, estas áreas adquirirán gradualmente valor
inmobiliario, debido al natural espaciamiento en el tiempo de las
crecidas y de esta manera, la implementación de un plan de
zonificación podrá traer costos mayores de expropiaciones (si son
necesarias) o dificultades en el proceso de obediencia a la
reglamentación. Esta situación sólo sufrirá modificación con la
ocurrencia de nueva crecida, con más daños. Estas condiciones
son más graves en la zona de pasaje de la crecida, en la cual la
municipalidad necesita gradualmente remover las obras que
obstruyen el escurrimiento.
Para mantener el recuerdo de las inundaciones en las calles
se puede utilizar la pintura de los postes de luz con distintos
colores. Esto democratiza la información sobre la inundación y
evita problemas inmobiliarios de compra y venta en las áreas de
riesgo.
Cuanto a las construcciones ya existentes en las áreas de
inundación, deberá ser realizado un catastro completo de las
mismas y establecido un plan para reducir las pérdidas en el lugar,
y también aquellas que son provocadas por el remanso resultante
de la obstrucción del escurrimiento. Varias son las condiciones
existentes que deberán ser analizadas caso a caso. Algunas
situaciones pueden ser: (a) para las obras públicas como escuelas,
hospitales y edificios administrativos se debe verificar la
viabilidad de protegerlos o removerlos para áreas seguras, a
mediano plazo; (b) las subhabitaciones como villas de
emergencias y habitaciones de población de baja renta, deben
tener su transferencia negociada para áreas más seguras; (c) para
áreas industriales y comerciales se puede incentivar las medidas
de protección a las construcciones y, caso sea necesario, de toda el
área a expensas de los beneficiados.
Cuando ocurren remociones o transferencias, el poder
público debe estar preparado con planes urbanos para destinar
estas áreas para otros usos o finalidades de recreación, como por
ejemplo, parques, evitando que vengan a ser nuevamente
ocupadas por subhabitaciones.
Algunas acciones públicas son esenciales en este proceso
tales como:
76
a. evitar construcción de cualquier obra pública en las áreas
de riesgo como escuelas, hospitales y edificios en general.
Las existentes deben poseer un plan de remoción a ser
ejecutado a lo largo del tiempo;
b. planificar la ciudad para gradualmente desplazar su eje
principal para los lugares de bajo riesgo;
c. las entidades financieras deberían evitar financiar obras en
áreas de riesgo;
d. utilizar mecanismos económicos para el proceso de
incentivo y control de las áreas de riesgo: (1) retirar el
impuesto predial a los propietarios que mantengan sin
construcción las áreas de riesgo y que las utilicen por
ejemplo, para la agricultura, recreación, etc; (2) intentar
crear un mercado para las áreas de riesgo de tal manera
que las mismas se vuelvan públicas con el pasar del
tiempo;
e. prever la inmediata ocupación de las áreas públicas de
riesgo cuando éstas sean desocupadas con algún plan que
demarque la presencia del municipio o del Estado.
79
Figura 2.19. Curvas de profundidad-daño para una casa de uno sólo pavimento
sin sótano (Simons et al., 1977).
80
2.7.3 Ecuación del perjuicio agregado
James (1972) presentó la ecuación de daño agregado, que
se basa en el crecimiento lineal entre el daño y el nivel medio de
inundación de la terraza de inundación. La ecuación es la
siguiente:
CD = K D h M U A (2.4)
Figura 2.20. Curvas de profundidad-daño para una casa de dos pavimentos sin
sótano (Simons et al., 1977).
81
El índice KD es definido por:
dD (2.5)
KD =
dy
83
Referencias
84
85
3.Gestión de inundaciones en
el drenaje urbano
El control del drenaje urbano involucra la gestión
del espacio urbano para controlar el impacto de la
impermeabilización y evitar la canalización
Figura 3.1. Características del balance hídrico en una cuenca urbana (OECD,
1986)
87
Figura 3.2. Impacto debido a la urbanización (Schueler, 1987)
91
Figura 3.6. Erosión urbana de superficies desprotegidas (Campana, 2004)
92
sistema de drenaje pueden ocurrir varios problemas en el
escurrimiento normal de las aguas, en función de la falta
de mantenimiento del sistema de drenaje y de proyectos
inadecuados los cuales no consideran la colmatación de
aquellas secciones muy anchas y con sección única (Figura
3.9)
d. obstrucción del escurrimiento por construcciones y riesgo: El
desarrollo urbano tiende a ocupar los espacios naturales de
escurrimiento de los excedentes pluviales dejando poco
espacio para éste, y con esto, se generan riesgos para su
propia habitabilidad y también para la de aguas arriba
(Figura 3.10).
93
Áreas de riesgo en laderas: La ocupación de las laderas en las
ciudades es una de las principales causas de muerte durante el
período de lluvias debido a los deslizamientos de tierra causados
por el escurrimiento de los excedentes pluviales en suelos de baja
sustentabilidad, los cuales presenta su estructura natural alterada
debido a la urbanización descontrolada (Figura 3.11).
95
mucho, desde compuestos orgánicos hasta metales altamente
tóxicos. Algunos contaminantes son utilizados para diferentes
funciones dentro del ambiente urbano como son los insecticidas,
los fertilizantes, el plomo proveniente de las emisiones de los
automóviles y la pérdida de aceite por parte de camiones, ómnibus
y autos, todos resultados de actividades normales dentro del
medio urbano. El hollín resultante de las emisiones generadas
dentro del ambiente urbano por parte de vehículos, industrias y la
quema de residuos se depositan en las superficies y son lavados
por la lluvia. El agua resultante de este lavado llega a los ríos
contaminada.
Los principales contaminantes encontrados en el
escurrimiento superficial urbano son: sedimentos, nutrientes,
sustancias que consumen oxigeno, metales pesados,
hidrocarburos, bacterias y virus patogénicos. Los valores medios
establecidos para Norteamérica son presentados en la Tabla 3.1.
97
La combinación de estos dos tipos de errores en la gestión
del microdrenaje tiene impactos en el macrodrenaje de las
ciudades los cuales ocurren de acuerdo a la siguiente secuencia:
100
Figura 3.15. Inundación del río Tietê en el puente de Bandeiras debido a la
urbanización de la ciudad de São Paulo.
101
La cuenca como sistema: Un Plan de Control de aguas pluviales
de una ciudad o región metropolitana debe contemplar las cuencas
hidrográficas sobre las cuales la urbanización se desarrolla. Las
medidas no pueden reducir un impacto de un área en detrimento
de otra, o sea, los impactos no deben ser transferidos.
102
El control permanente: El control de las crecidas es un
proceso permanente, no basta establecer reglamentos y construir
obras de protección, es necesario estar atento a las potenciales
violaciones de la legislación y la expansión de la ocupación del
suelo de las áreas en riesgo. Por lo tanto, se recomienda que: (a)
ningún espacio de riesgo debe ser desalojado si no hay una
inmediata ocupación pública que evite su invasión; (b) la
comunidad debe tener una participación en los planes, en la
ejecución y en la continua obediencia de las medidas de control de
crecidas.
Infiltración y percolación:
Los sistemas urbanos, de acuerdo con lo antes
mencionado, crean superficies impermeables que no existían en la
cuenca hidrográfica, generando impactos de aumento del
escurrimiento, que es transportado a través de conductos y
canales. Estos dispositivos hidráulicos presentan costos
directamente relacionados con los caudales máximos, aumentando
con la impermeabilización. Para reducir estos costos y minimizar
los impactos aguas abajo, una de las acciones es permitir una
mayor infiltración de la precipitación, creando una condición, que
sea lo más próxima posible, a las condiciones naturales.
Las ventajas y desventajas de los dispositivos que permiten
mayor infiltración y percolación son las siguientes (Urbonas y
Stahre, 1993):
106
camada superior del suelo y depende de la porosidad y de la
percolación. Por lo tanto, la capa freática debe ser baja, creando
espacio para el almacenamiento. Para áreas de capa freática alta,
este tipo de dispositivo no es recomendado. Las cuencas son
construidas para recoger el agua del tejado y crear condiciones de
escurrimiento a través del suelo. Estas cuencas son construidas
removiéndose el suelo y llenándolo con pedregullo, que crea el
espacio para el almacenamiento (Figura 3.19). De acuerdo con el
tipo de suelo, es necesario crear mayores condiciones de drenaje.
Para el suelo arcilloso con menor percolación, es necesario drenar
el dispositivo de salida. La principal dificultad encontrada con el
uso de este tipo de dispositivo es la obstrucción de los espacios
entre los elementos por el material fino transportado, por lo tanto,
se recomienda el uso de un filtro de material geotextil. De
cualquier manera, es necesario su limpieza después de algún
tiempo (Urbonas y Stahre, 1993).
107
• entradas permeables en la red de drenaje: En la Figura
3.20 a, se observa un filtro en la parte superior de la
caja, para evitar la obstrucción;
• trinchera permeable: es un caso especial de cuenca de
percolación y consiste en una caja con pedregullo y
filtro por donde pasa un conducto poroso o perforado
(Figura 3.20 b);
• cordón permeable: este dispositivo es utilizado
fuera del lote o dentro de condominios, industrias o
áreas comerciales (Figura 3.20 c).
109
piedras regulares de granito con juntas de arena, conocidas por
paralelepípedos, con desnivel de 4%; y otra parcela revestida con
piedras de concreto industrializado tipo “pavi S1”, igualmente con
juntas de arena, conocida por blocket, con desnivel de 2%; (d)
Pavimentos permeables: una parcela de bloques de concreto con
orificios verticales llenados con material granular (arena) con
desnivel de 2% y una parcela de concreto poroso con desnivel de
2%. Los experimentos fueron realizados con precipitación de
110mm / h, equivalente a un tiempo de retorno de 5 años para una
duración de 10 minutos. Los resultados de los experimentos son
presentados en la Tabla 3.2 donde se observa que los
paralelepípedos absorben parte de la precipitación para una
intensidad muy alta y los pavimentos permeables prácticamente
no generan escurrimiento. Se debe considerar que el experimento
fue realizado con un simulador de lluvia en una superficie de 1m2,
donde el efecto de almacenamiento en la superficie y en el
reservorio de los pavimentos permeables tiene más efecto. El
costo del pavimento permeable puede ser del orden de 30% más
que el pavimento común debido a la base necesaria para su
implantación. Se puede observar en los valores de la Tabla 3.2 que
los paralelepípedos o bloques, cuando no poseen juntas con
cemento pueden permitir almacenar e infiltrar una parte
importante de las precipitaciones frecuentes. Por lo tanto, calles
con este tipo de dispositivo deberían ser preservadas para evitar el
agraviamiento de los problemas de drenaje localizados en las
ciudades. En el caso que se asfalte o se pavimente, por lo menos
en el medio de estas estructuras, se debería mantener una faja sin
asfalto, lo que permitiría la infiltración y acumulación de parte del
volumen.
1
“pavi S” – Nombre comercial que se da en Brasil a un tipo de piedra de
concreto industrializado.
110
urbanística en el contexto de los emprendimientos. Las ventajas y
desventajas de los dispositivos de infiltración utilizados para el
control distribuido del escurrimiento son presentadas en la Tabla
3.3.
Figura 3.22. Uso de dispositivos para retener el agua de áreas impermeables (a)
la foto a la izquierda muestra las áreas drenadas de pavimentos para el césped y
de los tejados para los reservorios de piedra: (b) veredas con céspedes en las
laterales para aumentar la infiltración.
Figura 3.24. La foto a la izquierda muestra calle sin cordón que permite la
infiltración de parte del escurrimiento en las laterales con césped. En la foto a la
derecha se presenta un área de infiltración en un cantero.
111
Figura 3.25. Dos áreas experimentales en el estacionamiento del Instituto de
Pesquisas Hidráulicas (Porto Alegre – Brasil) con bloque perforado y asfalto
poroso.
Almacenamiento:
El almacenamiento puede ser efectuado en tejados, en
pequeños reservorios residenciales, en estacionamientos, en área
deportivas, entre otros, a continuación se presentan las principales
características de algunos sistemas de almacenamiento:
112
anual de 1500mm, es posible obtener 360m3 por año, que,
distribuidos, representan cerca de 15m3 por mes, valor más que
suficiente para abastecer una residencia. Evidentemente que, a
medida que el reservorio es mantenido con agua, se reduce su
capacidad de amortiguamiento.
V = 4,15 AI A (3.1)
114
Figura 3.27. Reservorios en edificio (Campana, 2004).
115
3.5.2 Medidas de control en el microdrenaje y
macrodrenaje
La medida de control de escurrimiento en el microdrenaje,
tradicionalmente utilizada, consiste en drenar el área urbanizada a
través de conductos pluviales hacia un colector principal o río
urbano. Este tipo de solución acaba transfiriendo hacia aguas
abajo el aumento en el escurrimiento superficial con una mayor
velocidad, ya que el tiempo de desplazamiento del escurrimiento
es menor que en las condiciones preexistentes. De esta manera, se
provocan inundaciones en los ramales principales o en el mismo
macrodrenaje.
Como se presentara oportunamente, la impermeabilización
y la canalización producen un aumento en el caudal máximo y en
el escurrimiento superficial. Para que este aumento de caudal no
sea transferido hacía aguas abajo se utiliza el amortiguamiento del
volumen generado, a través de dispositivos de retención como
pueden ser: tanques, lagos y pequeños reservorios a cielo abierto o
enterrados, entre otros dispositivos. Estas medidas son
denominadas de control aguas abajo (downstream control).
El objetivo de los reservorios de detención es minimizar el
impacto hidrológico de la urbanización, amortiguando la
reducción de la capacidad de almacenamiento natural de la cuenca
hidrográfica.
Este tipo de control tiene las siguientes ventajas y
desventajas (Urbonas y Stahre, 1993): costos reducidos, si se lo
compara a un gran número de dispositivos de control distribuidos;
menor costo de operación y mantenimiento; facilidad de
administración de la construcción; dificultad de encontrar lugares
adecuados; costo de adquisición del área a utilizar; reservorios de
dimensiones importantes tienen oposición por parte de la
población.
Este control ha sido utilizado cuando existen
restricciones por parte de la administración municipal al
aumento del caudal máximo debido al desarrollo urbano, y así,
ya fue implantado en muchas ciudades de diferentes países. El
criterio normalmente utilizado es que el caudal máximo del área,
con el desarrollo urbano, debe ser menor o igual al caudal
máximo de las condiciones preexistentes para un tiempo de
retorno predeterminado.
116
Características y funciones de los reservorios
Los reservorios de retención son utilizados de acuerdo al
objetivo del control deseado. Este dispositivo puede ser utilizado
para:
Tipos de reservorios
Los reservorios pueden ser dimensionados para que mantengan
una lámina permanente de agua, denominados de retención, o para
que se sequen después de su uso, durante una lluvia intensa y
después utilizados para otras finalidades. Este tipo de reservorio es
llamado detención (Figura 3.30 a).
117
a- Reservorio de detención
b- Reservorio de retención
Figura 3.30. Reservorios para el control de material sólido (Maidment, 1993)
118
mantenidas secas son los más utilizados en los Estados Unidos,
Canadá y Australia. Cuando son proyectados para el control del
caudal, su vaciamiento es rápido de hasta seis horas y con poco
efecto sobre la remoción de contaminantes. Si aumentada la
detención entre las 24 a 60hs, se podrá obtener mejoras en la
remoción de contaminantes (Urbonas y Roesner, 1994). Este tipo
de dispositivo retiene una parte importante del material sólido.
Cuando el drenaje utiliza la capacidad extra de volumen
del sistema para el amortiguamiento, y están ligados directamente
a la red de drenaje éste es llamado sistema on-line (Figura 3.31).
Cuando el escurrimiento es transferido para el área de
amortiguamiento, después de alcanzar un cierto caudal, y recibe
sólo lo excedente de la red de drenaje el sistema es denominado
off-line (Figura 3.32 y Figura 3.34).
119
En las detenciones “on-line” existen problemas para el
drenaje con flujos pluviales mixtos sobre todo cuando existe una
gran cantidad de conexiones clandestina a la red de drenaje,
debido a la gran contaminación que se origina en el reservorio,
principalmente en el período de sequía. En este caso, es
conveniente que el fondo de este sea de concreto para facilitar la
limpieza.
Este tipo de reservorio puede tener un fondo natural,
excavado o de concreto. Los reservorios en concreto son más
caros, pero permiten paredes verticales, con aumento del volumen.
Esto es útil donde el espacio tiene un costo elevado.
Los reservorios pueden ser abiertos o cerrados. Los
primeros generalmente poseen costo menores y mayor facilidad
de mantenimiento. Los segundos tienen mayores costo (pueden
llegar hasta 7 veces más que los primeros) y gran dificultad de
mantenimiento. Generalmente, son utilizados cuando se desea
utilizar el espacio superior, debido a la topografía o la presión de
la población vecina que temen a la basura y la calidad del sistema.
Los reservorios “off-line” pueden funcionar
automáticamente por gravedad (Figura 3.33), o mediante
sistemas de bombas cuando sea necesario obteniendo más
volumen para un espacio definido (Figura 3.34). La diferencia es
que en el primero caso el caudal inunda el área lateral y vuelve al
sistema de drenaje por gravedad, sin operación. Mientras que en
el segundo caso, debido a la necesidad de aumento del volumen
es necesario excavar debajo de la cota del sistema de drenaje y
para extraer todo el volumen es necesario recurrir al bombeo.
120
Figura 3.34. Detención cerrada (DAEE).
Ubicación
Como fue mencionado anteriormente, los reservorios
pueden ser abiertos o enterrados (Figura 3.33), de acuerdo con las
condiciones de su ubicación. En lugares donde el espacio es
reducido o que sea necesario mantener una superficie superior
integrada con otros usos, se pueden utilizar reservorios
subterráneos; sin embargo, el costo de este tipo de solución es
superior a de los reservorios abiertos.
La ubicación depende de los siguientes factores:
121
que drena poco volumen, el efecto será reducido;
• en zonas a desarrollar, se debe ubicar el reservorio en las
partes de poco valor, aprovechando las depresiones
naturales o parques existentes. Un buen indicador de
ubicación son las áreas naturales que forman pequeños
lagos o estanques antes de su desarrollo.
123
Figura 3.37. Sistema de transición
Cuenca desarrollada
En este escenario se debe procurar identificar las zonas de
inundación y buscar áreas propicias para amortiguar el
escurrimiento y no transferirlo hacía aguas abajo para cada uno de
los puntos críticos detectados. La combinación óptima será
aquella que tenga reservorios con el menor costo y ampliación del
escurrimiento que mejor se adapte al área urbana, o sea, menor
costo y ambientalmente adecuado.
Wisner y Cheung (1982) presentaron, conforme Tabla
3.4, una comparación entre otras alternativas y el uso de parques
para amortiguamiento.
En la Figura 3.38, son presentados el parque y los flujos
en un área urbana.
124
Tabla 3.4. Comparación entre almacenamiento en parque y otras alternativas
(Wisner y Cheung, 1982).
Tipo Almacena- Detención Detención Almacen-
miento del con agua seca amiento en
valle parque
Almacenamie Continuo continuo frecuente raro
nto
Estética sin Muy Muy menos
importancia importante importante importante
Mantenimient Pequeña alta moderada Muy pequeña
o
Probabilidad Pequeña moderada pequeña Muy pequeña
de accidente
Costo Alto moderado moderado bajo
Costo de la Ningún alto alto ningún
tierra
125
Cuenca en desarrollo
Considere la cuenca de la Figura 3.39. En la primera
etapa la cuenca no está totalmente urbanizada, y las inundaciones
ocurren en el tramo urbanizado, donde algunas áreas no están
ocupadas, porque se inundan con frecuencia. Cuando la cuenca se
encuentra en una etapa avanzada de desarrollo, la tendencia es que
las medidas estructurales predominen, con costos altos. Sin
embargo, se puede minimizar estos costos a través del aumento de
la capacidad de amortiguamiento en la cuenca urbana, buscando
recuperar, el máximo posible, el amortiguamiento natural por la
explotación de todas las áreas posibles. Yoshimoto y Suetsugi
(1990) describieron las medidas tomadas para reducir la
frecuencia de inundaciones en el río Tsurumi, dentro del área de la
ciudad de Tokio. La cuenca fue subdividida en tres: retención,
retardo y áreas inferiores, y definido el caudal de control. En el
área de retención, fueron obtenidos 2,2 millones de m3 para
amortiguamiento a través de acción municipal, además de otras
medidas de retardo. Estas acciones redujeron los perjuicios para
crecidas recientes.
126
Problemas
1. Analice los tipos de medidas de control del escurrimiento
en la fuente para el drenaje urbano y presente sus usos,
ventajas y desventajas.
2. ¿Cuál es la utilización de pavimento permeables en un
proyecto de drenaje? Sus ventajas y desventajas.
3. ¿Cuál es la diferencia entre detención y retención en el
control de las inundaciones decurrentes del proceso de
urbanización? ¿Cuáles son los impactos que estos
dispositivos promueven con relación a las inundaciones?
4. ¿Cuáles son los tipos de inundaciones y cuáles son los
impactos relacionados?
5. Identifique también para la cuestión anterior cuándo ocurre
la transferencia de impactos.
6. ¿Cuáles son las principales estrategias de gestión del
drenaje urbano para ciudad implantada y para el futuro
desarrollo?
7. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los controles en
la fuente? ¿Cuáles son más sustentables?
8. ¿Cuáles son las relaciones que deben existir entre un Plan
Director Urbano y el Plan de Drenaje y éste con del
escurrimiento sanitario y residuo sólido?
9. Muchas ciudades utilizan el control sobre las áreas
impermeables, pero no consiguen evitar el impacto sobre
el drenaje. ¿Por qué? ¿Cuál es el problema y cómo
resolver a través de medidas no estructurales?
10. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de las medidas de
control en el microdrenaje y en el macrodrenaje?
11. Describa las etapas de un Plan Director de Drenaje
Urbano. ¿Cuáles son las medidas no estructurales?
12. Identifique los principios de un Plan Director de Drenaje
Urbano.
13. ¿En la evaluación económica de los perjuicios de
inundación cómo los costos deberían ser distribuidos entre
la población?
14. ¿Cuáles son los tipos de inundaciones y cuáles son los
impactos relacionados?
15. Identifique también para la cuestión anterior cuándo ocurre
la transferencia de impactos.
16. ¿Cuáles son las principales estrategias de gestión del
drenaje urbano para ciudad implantada y para el futuro
desarrollo?
17. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los controles en
la fuente? ¿Cuáles son más sustentables?
127
18. ¿Cuáles son las relaciones que deben existir entre un Plan
Director Urbano y el Plan de Drenaje y éste con el
escurrimiento sanitario y residuo sólido?
19. Muchas ciudades utilizan el control sobre las áreas
impermeables, pero no consiguen evitar el impacto sobre
el drenaje. ¿Por qué? ¿Cuál es el problema y cómo
resolver a través de medidas no estructurales?
20. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de las medidas de
control en el microdrenaje y en el macrodrenaje?
21. Describa las etapas de un Plan Director de Drenaje
Urbano. ¿Cuáles son las medidas no estructurales?
22. Identifique los principios de un Plan Director de Drenaje
Urbano.
23. En la evaluación económica de los perjuicios de
inundación ¿cómo los costos deberían ser distribuidos
entre la población?
Referencias
128
129
130
131
4.Gestión integrada de
aguas urbanas
La gestión integrada, entendida como interdisciplinaria e
intersectorial de los componentes de las aguas urbanas, es
una condición necesaria para que los resultados atiendan
las condiciones del desarrollo sustentable urbano.
133
4.1 Fases de la gestión
A fines del siglo XIX y mediados del siglo XX, el
concepto de agua urbana se resumía al abastecimiento, o sea,
entregar agua a la población y retirar los desechos cloacales lo
más lejos posible depositándolos en la naturaleza sin ningún tipo
tratamiento. Esta es la fase que se puede llamar higienicista (o
sanitarista), en función de la preocupación de los sanitaristas de
evitar la proliferación de enfermedades y reducir las enfermedades
que se contraían a través de la vinculación hídrica. En este período
la solución siempre fue recolectar el agua desde aguas arriba y
depositar las cloacas aguas debajo de las urbes. Los excedentes
pluviales eran planificados para escurrir libremente por las
calles hacia los ríos. Este escenario fue aceptable mientras las
ciudades tenían poblaciones de hasta 20 mil habitantes y se
encontraban distantes una de la otra para que los desechos
cloacales de una ciudad no contaminaran la otra.
Las ciudades crecieron, quedando más próximas una de las
otras y la estrategia de desarrollo se mantuvo en la fase
higienicista, generando lo que llamamos ciclo de contaminación
(vea capítulo 1, Tucci, 2003), donde la ciudad aguas arriba
contamina la de aguas abajo y ésta deberá contaminar la siguiente.
Muchas ciudades, por medio de sus tomadores de
decisiones consideraron que las inversiones necesarias para el
tratamiento de los desechos cloacales eran muy elevadas y optaron
por inversiones en sectores considerados más importantes, sin
comprender que estaban dejando de combatir el “cáncer” en su
origen. Hoy la contaminación está tomando al sistema y el costo
para solucionar esto es extremadamente alto.
Los países desarrollados salieron de la fase llamada aquí
de higienicista (Tabla 4.1) hacía una nueva fase, la correctiva con
el tratamiento de los desechos cloacales domésticos y el control de
las inundaciones urbanas con detenciones (amortiguamiento). La
cloaca domiciliaria fue implementada casi en su totalidad, de esta
manera el ambiente urbano mejoro, pero no recuperó su
condición natural. Se observó que además del flujo cloacal existía
la carga del flujo pluvial y la inadecuada distribución de los
residuos sólidos, procesos totalmente interrelacionados en el día a
día. Los residuos que no son recolectados, acaban dentro del
sistema de drenaje. Los países desarrollados están actuando para
resolver este tipo de problema. Este impacto presenta un costo aún
mayor, pues es difuso y distribuido en toda la ciudad. En esta
búsqueda de soluciones se descubrió que no bastaba actuar sobre
el problema en el “end of pipe”, o sea, después que ocurrió y está
134
en los conductos, pero es necesario trabajar preventivamente en el
origen del desarrollo urbano. De la misma manera que la
medicina moderna está transformándose en una acción preventiva
y no curativa.
Para la búsqueda de una solución ambientalmente
sustentable es necesario el gerenciamiento integrado de la
infraestructura urbana, comenzando por la definición de la
ocupación del espacio teniendo en cuenta la preservación de las
funciones naturales como es la infiltración y la red natural de
drenaje. Este tipo de desarrollo ha recibido la denominación de
LID (Low Impact Development) en los Estados Unidos (U.S.
Department of Housing and Urban Development, 2003 y NAHB
Research Center, 2004 y U.S. Environmental Protection Agency,
2000) o Water Sensitive Urban Design (WSUD) en Australia.
Pese a representar la manera moderna y ambiental de
ocupación en los países desarrollados, en Brasil esta visión de
ocupación del espacio no es nueva, pues Saturnino de Brito a
comienzos del siglo XX planifico algunas ciudades según esta
concepción la cual estaba adelantada a su tiempo. Infelizmente, no
todas las ciudades adoptaron esta visión.
Los países en desarrollo están intentando salir de la
primera fase hacía una acción correctiva y no poseen
prácticamente ningún desarrollo dentro de la fase sustentable. La
tercera fase involucra la integración entre el proyecto de
implantación y el espacio, el proyecto arquitectónico y las
funciones de la infraestructura de agua dentro del ambiente
urbanizado y no apenas la búsqueda de espacio de infiltración
dentro del diseño de un proyecto.
Tabla 4.1. Etapas del desarrollo sustentable urbano en los países desarrollados
Años Período Características
Hasta Higienicista Abastecimiento de agua sin tratamiento de cloacas,
1970 transferencia hacia aguas abajo del escurrimiento pluvial
por canalización
1970- Correctivo Tratamiento de cloacas, amortiguamiento cuantitativo del
1990 drenaje y control del impacto existente de la calidad del
agua pluvial. Involucra, principalmente, la actuación sobre
los impactos.
1990* - ? Sustentable Planeamiento de la ocupación del espacio urbano,
obedeciendo a los mecanismos Naturales del escurrimiento;
Control de los microcontaminantes, de la polución difusa
y el desarrollo sustentable del escurrimiento pluvial a través
de la recuperación de la infiltración.
* período que se inició este tipo de visión
135
4.2 La visión del desarrollo urbano
integrado y sustentable
4.2.1 Visión integrada del ambiente urbano
Es importante caracterizar el desarrollo sustentable urbano
el cual involucra la minimización del impacto ante la alteración
natural del medio ambiente formado por el clima, el suelo, el aire,
el agua, la biota, entre otros. Para alcanzar este objetivo es
necesario comprender primero los impactos que producen cada
una de las intervenciones y buscar soluciones en que este impacto
quede restringido a un universo mínimo local a través de un
proyecto de intervención sustentable a lo largo del tiempo.
El ambiente urbano es muy complejo para ser tratado en
un texto introductorio como éste, por lo tanto se examina aquí el
ambiente relacionado con las aguas pluviales que han sido la base
de la nueva concepción de intervención para la ocupación del
espacio.
En este escenario, la ocupación tradicional no intenta
comprender como el suelo, el agua y las plantas están integradas
en la naturaleza para intentar mitigar los efectos adversos de la
introducción de superficies impermeables de tejados, paseos
públicos, calles, entre otros. En la naturaleza la precipitación que
no se infiltra tiende a formar escurrimientos naturales de acuerdo
con la intensidad y frecuencia de la precipitación, cobertura y
resistencia del suelo. El agua que infiltra, escurre por el subsuelo y
en el acuífero hasta llegar a los ríos. Con la destrucción que
ocasiona el drenaje urbano, el nuevo sistema es formado por
calles, boca de tormenta, conductos y canales que aceleran el
escurrimiento y aumentan los caudales máximos en varias veces,
además de lavar las superficies transportando los contaminantes
generados por las emisiones de autos, camiones, ómnibus,
industrias y hospitales.
Entonces ¿cuál es la receta? Al comienzo se busco
recuperar la capacidad de amortiguamiento a través de
detenciones, pero aún así, el volumen superficial aumentó debido
a las áreas impermeables y la zona utilizada para la detención fue
retirada por la población debido a la polución generada y los
conflictos para el uso de este espacio. Por lo tanto, se ha buscado
recuperar la capacidad de infiltración perdida a través de acciones
locales en las residencias, edificios y mediante el uso de trincheras
de infiltración, pero aun dentro de una visión localizada y del tipo
“end of pipe”, quiere decir, tratando de remediar un proyecto
específico o un impacto.
136
La visión integrada en este caso, se inicia en la
planificación del desmembramiento y ocupación del espacio en la
fase del loteo, momento en el cual el proyecto debe estar ajustado
para la preservación del escurrimiento natural existente. Este
proyecto debe ser el contrario de lo que se proyecta actualmente,
pues los de hoy apenas se basan en la maximización de la
explotación del espacio independiente de la red de drenaje natural.
El proyecto sustentable preserva el sistema natural y distribuye la
ocupación en lotes menores, conserva una gran área verde común,
retira el cordón de las calles de menor movimiento, integrando el
asfalto con el césped u otros sistemas naturales vegetales, para que
toda el agua se infiltre. Un proyecto de esta naturaleza retira las
divisiones de las propiedades (como en las propiedades rurales en
el proyecto de pequeñas cuencas y conservación del suelo). De
esta manera, se reduce el escurrimiento a las condiciones
preexistentes para las lluvias frecuentes, el agua se infiltra y no
transfiere cantidad y calidad hacia aguas abajo. Esta es la
característica de un proyecto residencial, mientras que las áreas
industriales y comerciales exigen proyectos específicos de control,
pero aún dentro de una integración conceptual de los proyectistas.
El costo de una infraestructura sustentable tiende a ser
menor que el costo de un sistema correctivo, y éste aún menor que
la infraestructura tradicional debido a la retirada de varios
sistemas, como la eliminación de redes de conductos de drenaje,
cordón cuneta, entre otros, que son remplazados por céspedes que
infiltran, canaletas de césped y sistemas naturales protegidos.
El lector puede imaginar que esto es una utopía dentro de
nuestra realidad, sin embargo, el emprendedor es sensible con
respecto al costo y con respecto a la población que desea comprar
un ambiente más adecuado y está buscando calidad de vida. Estos
factores citados son muy importantes en la toma de decisión.
Difícilmente, los países en desarrollo podrán saltar etapas
debido al gran pasivo existente en las ciudades en cuanto al
escurrimiento pluvial (sin hablar de todo los demás que están
pendientes). Por lo tanto, es necesario desarrollar estrategias
dentro de dos plataformas principales:
137
Estas dos medidas pueden ser implementadas a través del
Plan Director de Aguas Pluviales (o como algunos denominan de
Drenaje Urbana), o mejor aún, por un Plan Director Urbano que
incluya estos elementos más el escurrimiento sanitario, residuo
sólido, transporte y uso del suelo (Figura 4.1).
En la Figura 4.2 se pueden observar como los diferentes
Planes de la ciudad se integran y buscan identificar los
componentes de integración visando la solución de estos aspectos
de manera integrada.
Figura 4.2. Interfaz entre los Planes de la Ciudad y el Plan Director de Aguas
Pluviales o del Drenaje Urbano.
139
La mayor dificultad para la implementación del
planeamiento integrado proviene de una limitada capacidad
institucional de los municipios para afrontar problemas complejos
e interdisciplinarios y la forma sectorial como la gestión
municipal se encuentra organizada.
Experiencias
La experiencia americana en el proceso ha sido aplicada a
través de un programa nacional desarrollado por la EPA
(Environmental Protection Agency) que obliga a todas las
ciudades con más de 100 mil habitantes a establecer un programa
de BMP (Best Management Practices). Recientemente se inició la
140
segunda fase del programa para ciudades con población inferior a
la mencionada (Roesner y Traina, 1994). Las BMP’s involucran el
control de la calidad y cantidad de agua por parte del municipio a
través de medidas estructurales y no estructurales. El municipio
debe demostrar que está avanzando e intentando alcanzar estos
objetivos a través de un Plan. Este proceso contribuye para reducir
la polución difusa de los ríos en las proximidades de las ciudades.
La penalidad que puede ser impuesta es la acción judicial de la
EPA contra el municipio.
La experiencia francesa involucra el gerenciamiento de los
impactos y controles a través del comité de cuenca, que es el Foro
básico para la toma de decisiones. Las metas que los municipios y
otros actores deben ser alcanzados son decididas en esté comité.
Legislaciones
Las legislaciones que involucran las aguas urbanas están
relacionadas con: recursos hídricos, uso del suelo y licencia
ambiental. A continuación se presenta un análisis dentro del
escenario brasileño donde existen los niveles: Federal (país),
Estatal (Estado o Provincia) y Municipal (Figura 4.3).
142
confiscación. Actualmente, las legislaciones del uso del suelo se
apropian de la propiedad privada y aún exigen el pago de
impuestos por el propietario, que no posee alternativa económica.
La consecuencia inmediata en la mayoría de las situaciones es la
desobediencia legal.
143
estructura de gestión se origina con algunas dificultades:
144
Gerenciamiento de cuencas urbanas compartidas entre dos o
más municipios: Gran parte de las ciudades posee cuencas
hidrográficas comunes con otros municipios. Generalmente
existen los siguientes escenarios: (a) un municipio está aguas
arriba de otro; (b) el río divide los municipios.
El control institucional de las aguas urbanas, que involucra
por lo menos dos municipios, puede ser realizado de la siguiente:
145
criterios y normas cuanto las alteraciones en la cuantidad
y calidad del agua pluvial proveniente de áreas urbanas.
147
Referencias
148
149
5.Plan de Aguas Pluviales
La gestión de aguas pluviales dentro del municipio es
realizada dentro del Plan de Aguas Pluviales y debe estar
subordinado al Plan Director Urbano de las ciudades.
5.1.1 Gestión
La gestión de los servicios de aguas urbanas, o sea, de
agua y saneamiento básico, drenaje urbano y residuos sólidos
deberían ser implementados por una única estructura municipal en
función de la sinergia y economía de escala de los servicios.
En algunos países como Brasil, los servicios de agua y
saneamiento fueron desarrollados a lo largo del tiempo por
empresas provinciales, mientras que todos los demás servicios
quedaron a nivel municipal. En los municipios donde esto ocurre
difícilmente esta configuración podrá cambiar a corto plazo, a
pesar de ser de atribución del municipio la concesión de los
servicios de agua y saneamiento. En este caso, es necesario que
150
los demás servicios sean agregados en una única institución y que
sean definidos mecanismos institucionales de gestión.
5.2 Estructura
La estructura del Plan Director de Drenaje Urbano se
presenta en la Figura 5.1 (Tucci, 2001). Los grandes grupos son:
DATOS DE ENTRADA
INSTITUCIONAL CATASTRO FISICO DATOS HIDROLOGICOS
Legislación: planes urbanos, residuos, Red de drenaje, cuencas y Precipitación, caudal,
saneamiento, etc., uso del suelo sedimentos,
Gestión del drenaje calidad del agua
Figura 5.1. Estructura del Plan de Aguas Pluviales (adaptado de Tucci, 2001)
5.2.1 Principios
Los principios a continuación caracterizados tienen como
objetivo evitar los problemas descriptos en el capítulo anterior.
Estos principios son esenciales para el buen desarrollo de un
programa de aguas pluviales sustentable:
155
de las medidas de control de crecidas.
5.2.3 Estrategias
Las estrategias pueden ser establecidas considerando el
desarrollo del Plan y del control ambiental:
5.2.4 Escenarios
Se deben considerar dos aspectos en los escenarios de
desarrollo del plan: (a) escenario de desarrollo urbano; (b)
medidas de control adoptadas en los escenarios. Los principales
escenarios identificados cuanto al desarrollo urbano en este
estudio son los siguientes:
i. Actual: Condiciones de urbanización actual,
obtenida de acuerdo con estimaciones
demográficas e imágenes de satélite;
ii. Escenario actual + PDDUA: Este escenario
involucra la ocupación actual para las partes de
la cuenca donde el Plan fue superado en su
previsión, junto a las pautas del Plan para las
áreas en que el Plan no fue superado;
iii. Escenario de ocupación máxima: Este escenario
involucra la ocupación máxima de acuerdo con
lo que viene siendo observado en diferentes
partes de la ciudad que se encuentran en esta
etapa. Este escenario representa la situación que
ocurrirá si el uso disciplinado del suelo no es
obedecido.
5.3 Medidas
5.3.1 Medidas no-estructurales
Las principales medidas no estructurales son las
siguientes:
• legislación y reglamentación sobre el aumento del caudal
debido a la urbanización y a la ocupación del área de
riesgo de áreas ribereñas;
• gestión de los servicios urbanos relacionados con las aguas
pluviales.
Legislación y reglamentación
Reglamentación del drenaje urbano: uso de reglamentación
para el control del drenaje urbano para los lugares a ser
desarrollados tanto a nivel de nuevos loteos como en la
159
densificación, que involucra la aprobación de obras en áreas ya
loteadas. La evaluación del Plan Director de Porto Alegre y el
Decreto presentado en el anexo A es un ejemplo de
reglamentación que puede ser utilizada en el Plan Director
Urbano.
Plan de la Cuenca
La estructura del estudio de alternativa del Plan se presenta
en la Figura 5.3. Se observa que existen tres grandes grupos:
Datos de Entrada, Planes de las Cuencas y Elaboración de los
Productos. Luego de desarrollado el Plan las acciones apuntan a la
implementación de las obras.
163
costos de implementación de las alternativas y elección de la
alternativa de proyecto y del plan de acción para implementación
de las medidas.
164
remanso y escurrimiento bajo presión, produciendo
inundaciones en diferentes puntos que necesitan de soluciones
específicas, o cuando la interacción en la red es muy grande.
En este caso, el módulo galería es representado por las
ecuaciones dinámicas (de Saint Venant) para superficie libre o
para escurrimiento bajo presión con adaptación según el
concepto de la “ranura de Preissmann”. Este modelo también
es utilizado en la verificación de proyecto y para evaluar el
impacto para riesgos superiores al del proyecto.
165
productos tales como manuales de drenaje.
• para poder generalizar los criterios, parámetros y
metodologías utilizadas, es conveniente evitar el uso de
metodologías específicas de software, sobre las cuales no
es fácil encontrar referencias, ejemplos o otros tipos de
auxilio para la aplicación (los métodos no deberían ser
“software-dependientes”).
• el volumen de simulaciones a ser realizadas es muy
grande. Considerando la red de macrodrenaje a partir de
los conductos de 1 m de diámetro o equivalentes, el
tamaño medio de las “cuencas elementares” generalmente
es de 0,5 a 1 km2. Las metodologías adoptadas no deben
ser excesivamente trabajosas, particularmente en cuanto a
la determinación de sus parámetros.
166
problemas causados por las inundaciones son muy valiosas en este
sentido; usualmente los profesionales del área de drenaje pluvial
son capaces de hacer un mapeamiento por lo menos razonable de
los lugares y frecuencia de las inundaciones. Otra fuente
interesante de informaciones son las autoridades de tránsito, ya
que la circulación de vehículos es afectada por las inundaciones.
167
no llevar en cuenta la variación temporal de la lluvia, no siendo
adecuado para el cálculo de volúmenes. Además de ello, el
coeficiente de escurrimiento (y el método racional) son aplicables
a área pequeñas; aunque las cuencas elementares utilizadas en la
elaboración del plan sean del orden de 0,5 a 1 km2, las cuencas
sobre las cuales se trabaja son generalmente mayores.
Las metodologías de separación de escurrimiento toman
como referencia, para determinación de los parámetros, el tipo del
suelo. En áreas urbanizadas o en proceso de urbanización, la
camada superior del suelo es removida, cubierta o muy alterada.
Por lo tanto, se debe tener mucho cuidado al utilizar mapas de
suelos, que normalmente describen sólo la situación natural de
preurbanización. En este caso, la estimación del área impermeable
es fundamental.
Campana y Tucci (1999) presentaron una curva que
relaciona la densidad habitacional y el área impermeable de una
cuenca con base a los datos de Curitiba, Sao Paulo y Porto Alegre.
Esta curva permite estudiar escenarios futuros de ocupación
urbana, ya que la densidad habitacional es utilizada como
indicativo del Planeamiento Urbano.
168
reales condiciones del escurrimiento y de la escala de aplicación.
Por ejemplo, un cordón de cuneta podría ser considerado como un
canal triangular; pero en realidad en este lugar hay autos
estacionados, así como bolsas de basura y otros objetos similares,
que hacen con que el escurrimiento parezca más una cascada de
reservorios que un canal. Por otro lado, cuando la unidad de
representación es una manzana o más, la definición de la
“rugosidad” o el “desnivel” de un conjunto de tejado, patios,
césped, etc., considerados en conjunto requieren de un ajuste con
datos observados.
169
simulaciones de proyecto, ya que la red debe ser capaz de
absorber en cada punto el agua que llega. Ya en las
simulaciones para calibración, cuantitativa o cualitativa, y
simulaciones de diagnóstico en general, es importante no
confundir los puntos de insuficiencia de la red con los
puntos donde ocurrirán inundaciones.
170
el caudal de proyecto menor o igual a las condiciones existentes al
proyecto.
171
Reservorios de detención: Por tratarse de una visión de
planeamiento, no es indispensable presentar el estudio técnico
completo del proyecto de estas propuestas; sin embargo, esto no
significa que sea suficiente definir la ubicación y estimar el
volumen necesario, excepto cuando las informaciones no permitan
una mayor profundización, o el estudio sea muy preliminar.
Además de la estimación del volumen necesario, es
imprescindible verificar la viabilidad del funcionamiento. Esto
significa verificar especialmente las condiciones de entrada y
salida del reservorio, las cotas de operación y las estructuras
hidráulicas. Puede suceder una situación en que un reservorio
tenga un volumen adecuado, pero no existe una estructura
hidráulica que consiga el efecto deseado de amortiguamiento del
hidrograma; o existe el volumen y las estructuras hidráulicas, pero
las cotas no permitan el funcionamiento adecuado.
172
conductos rectangulares.
173
Figura 5.4. Curva costo medio de construcción en función de la conductancia
hidráulica (Villanueva y Tucci, 2003).
(5.1)
Viabilidad Económica
La evaluación económica posee dos componentes en este
plan: (a) evaluación económica de las alternativas, según citado
anteriormente, donde es evaluado el costo de las obras; (b)
mecanismos de financiamiento de las obras y de la operación del
drenaje destacado al final de este capítulo.
La viabilidad económica del Desarrollo de las Medidas
Estructurales y el Control a lo largo del tiempo del drenaje urbano
depende de la capacidad económica de implementación de las
medidas.
Los costos relacionados con el drenaje urbano y control de
174
inundaciones de las áreas urbanas abarcan:
175
1. Utilizar el área construida de cada propiedad proyectada
para el plan del área del terreno como el área impermeable.
Este valor no es lo real, pues el espacio impermeabilizado
tiende a ser mayor en función de los pavimentos.
2. Establecer un programa de evaluación del área
impermeable con base a imágenes de satélite y
verificación por muestreo a través de visita local.
5.4 Productos
Los productos del Plan son:
• Reglamentación del Plan Director de Desarrollo Urbano y
Ambiental en los artículos relacionados con el drenaje
urbano;
• Plan de Acción: control de las cuencas hidrográficas
urbanas de la ciudad;
• Propuesta de gestión para la ciudad;
• Manual de Drenaje.
5.5 Programas
Los programas son los estudios complementarios de medio
y largo plazo que son recomendados por el Plan que propicia la
mejoría de las deficiencias encontradas en la elaboración del Plan
desarrollado. Los programas identificados en esta fase del Plan
están presentados en el capítulo 4 de este libro y se destacan en los
siguientes aspectos:
• Programa de monitoreo;
• Estudios complementares necesarios para mejorar el
Plan;
• Mantenimiento;
• Fiscalización;
• Educación.
182
Justificación: La estimación de estos parámetros es realizada con
base en datos existentes, generalmente limitados. Con la colecta
de datos hidrológicos de las cuencas previstos en el programa de
monitoreo y con aquellos que pueden ser implementados en
nuevos programas, es posible verificar la relación entre los
parámetros y las características de las cuencas, reduciendo las
incertidumbres de las estimaciones.
183
Metodología: La metodología propuesta consiste en lo siguiente:
Programa de mantenimiento
El programa de mantenimiento es esencial para permitir
que las obras previstas se vuelvan efectivas a lo largo del tiempo.
185
En este sentido, como fue recomendado en el capítulo anterior, la
Municipalidad debería crear un grupo gerencial y de
mantenimiento de las detenciones construidas, teniendo en cuenta
estos aspectos:
• Drenaje urbano;
• Control de los residuos sólidos;
• Protección ambiental;
• Paisajismo y recreación urbana.
Metodología:
Programa de Educación
La falta de conocimiento en cuanto a los impactos de la
urbanización en el drenaje es muy grande, tanto en el ambiente
técnico como en la población en general. Esto dificulta la toma de
decisión, máxime en ambientes donde la población participa
186
directamente de las decisiones de inversión de la ciudad.
Objetivos:
Metodología:
Referencias
187
188
189
6.Estudios de Casos
Carlos E. M. Tucci y Juan Carlos Bertoni
190
de Brasil
191
La reglamentación indica que las áreas de inundaciones
son parte de las áreas de preservación permanente, como
especificado en el Plan Director y abajo de 24 m.
Este tipo de política permite mantener un valor económico
para las áreas de restricción y permite una gestión de las áreas de
riesgo. El resultado de este tipo de planeamiento ha mostrado una
reducción de los perjuicios de inundaciones a lo largo del tiempo.
En los últimos 26 años ocurrieron 7 inundaciones superiores a los
24 m y 3 superiores a los 26 m.
192
Figura 6.1. Evolución de las ciudades y ocupación de la terraza de inundación.
Inundaciones
Las ciudades de União da Vitória y Porto União se
desarrollaron en las orillas del río Iguaçu, donde sólo sucedieron
crecidas pequeñas o medianas por un período razonablemente
largo (1953 a 1982). Esta baja frecuencia, que también ocurrió en
cuencas vecinas como del río Itajaí-Açu, llevó a la población a
ocupar el área de riesgo de la terraza de inundación.
En 1983 las ciudades sufrieron una inundación de
significativo impacto, con perjuicios económicos (figura 2.3), que
provocaron grandes dificultades para la población y para las
empresas industriales y comerciales, algunas de las cuales nunca
se haN recuperado, y otras aún hoy se resienten de aquellas
pérdidas, incapacitadas de realizar inversiones indispensables a su
modernización. Esta crecida tuvo la mayor cota de inundación en
107 años (riesgo estimado de 170 años y 62 días de duración) y el
perjuicio estimado en U$S 78,1 millones. En esta época, apenas
con los datos de registros continuos (1930-1983), fue estimada
que la crecida podría tener un tiempo de retorno del orden de
1.000 años. Sin embargo, estos resultados no consideraron las
193
marcas históricas, y sobrestimaron el tiempo de retorno. En 1982
ocurrió otra crecida, menor que la de 1983, pero de magnitud e
impactos similares (riesgo estimado de 50 años, duración de 65
días y perjuicios de U$S 54,6 millones). Cabe destacar que la
parte de las ciudades afectadas por las crecidas es una región en
general valorizada, próxima al centro y con buena infraestructura.
Esto es particularmente así en el caso de União da Vitoria, que
además de esto enfrenta dificultades de expansión, limitada por el
río y por Porto União.
En las Figura 6.2 y Figura 6.3, se puede tener una idea de
hasta donde llegaron las inundaciones, las características de las
áreas inundadas; y por lo tanto, de la magnitud del impacto que
éstas tuvieron sobre la población y sobre las ciudades,
cuantificado en la Tabla 6.1.
Tabla 6.1. Perdidas estimadas (mil U$S) en União da Vitória y Porto União
(JICA, 1995)
1982 1993 1992 1983
Niveles 746,06 746,86 748,51 750,03
Pérdidas directas 6.910 17.289 36.388 52.081
Pérdidas indirectas 3.455 8.644 18.194 26.040
(50%)
PÉRDIDAS 10.365 25.933 54.582 78.121
TOTALES
1.000 U$S
194
Figura 6.3. União da Vitória y Porto União en la inundación de 1983
Conflicto
En 1983 la población hizo un deducción simple: “antes
de la presa no había crecidas, y después de la presa nos
inundamos, por causa de la presa”, y pasó a considerar a la Usina
de Foz de Areia y a la COPEL (empresa provincial encargada de
la generación eléctrica) como los grandes culpables por la crecida.
Fue así que se generó un conflicto, agraviado por la difícil
comunicación entre las partes. Con el tiempo, este conflicto fue
perdiendo fuerza, hasta la crecida de 1992. Como la población
había comprendido que el riesgo era muy pequeño y nuevamente,
en menos de 10 años, había ocurrido una segunda crecida, el
conflicto retornó con mayor intensidad.
El largo período (1935 a 1982) sin crecidas importantes
había creado una falsa seguridad entre la población, que fue
ocupando las áreas ribereñas. Esto también incentivó a la no
ejecución del planeamiento y la prevención contra inundaciones.
La crecida de 1983 levantó un alerta sobre el riesgo, pero este fue
despreciado con base en estudios estadísticos aparentemente
confiables (50 años de datos), que sin embargo, no tuvieron en
cuenta informaciones existentes y valiosas (las marcas históricas
de inundación). Cuando en 1992, ocurrió una nueva crecida,
menor que la de 1983, pero de magnitud e impactos similares, se
generó entre la población un clima de revuelta y desconfianza con
relación a los estudios técnicos. Estas condiciones motivó la
creación en 1993 de una Organización No Gubernamental (ONG),
195
la SEC-CORPRERI (Sociedad de Estudios Contemporáneos –
Comisión Regional Permanente de Prevención Contra Crecidas
del Rió Iguaçu). Esta ONG se ha transformado en el principal
agente de concientización y movilización de la sociedad, así como
en un interlocutor válido frente a todos los organismos
(municipales, provinciales y federales) con jurisdicción sobre el
problema. Entre las acciones desarrolladas por la SEC-
CORPRERI están: (a) campañas educativas y charlas; (b)
contratación de estudios y asesoría técnica para orientar la ciudad;
(c) Plan de Acción SEC-CORPRERI: un conjunto de actividades
y de propuestas con el objetivo específico de minimizar los
impactos de las crecidas en la región; (d) apoyar la actualización
del Plan Director.
Estudios realizados por el CEHPAR por solicitación de la
COPEL indicaban que ni la presa de Foz do Areia ni su operación
durante las crecidas tuvieron influencia sobre los niveles
alcanzados en União da Vitoria y Porto União. La población, sin
embargo, no creyó en los resultados de los estudios. Estudios
independientes (Tucci y Villanueva, 1997) contratados por la
CORPRERI confirmaron que la presa Foz do Areia no tuvo
influencia sobre las crecidas recientes en las ciudades.
Medidas de Control
Jica (1995) analizó la alternativa de construcción del dique
de protección contra inundación para las dos ciudades y
recomendó un estudio de viabilidad. Los estudios independientes
(Tucci, 1993 y Tucci y Villanueva, 1997) y la discusión con la
comunidad eliminó la alternativa estructural debido a lo siguiente:
(a) financiación de las obras; (b) alteración de la convivencia de la
ciudad con el río, que representa un elemento turístico
fundamental. De esta manera las alternativas recomendadas
fueron las siguientes: (a) zonificación de las áreas de
inundación de las ciudades e implementación en el Plan Director
de las mismas; (b) pronóstico y alerta de inundaciones.
La propuesta de zonificación (Tucci y Villanueva, 1997)
fue de evitar las construcciones en la cota inferior a 10 años y
disciplinar la ocupación hasta la cota de la crecida de 1983. En la
Figura 6.4 son presentadas las áreas de riesgo en el cual se basó
la zonificación de las ciudades. La ciudad de Porto União incluyó
las medidas por legislación y en União da Vitoria aún existe
mucha resistencia. El sistema de pronóstico en tiempo real es
operado por la COPEL, que transmite para la Defensa Civil de la
ciudad cuando los niveles de alerta son alcanzados.
Algunas de las medidas relacionadas: (a) las
196
recomendaciones fueron de poner marcas en los postes del
alumbrado público para identificar las inundaciones y tornar así
público los riesgos, evitando la especulación inmobiliaria por falta
de informaciones; (b) ejecución de casas de tipo lacustre para
convivir con las crecidas. Actualmente es frecuente ver casas a 2
o 3 m del suelo, como en la Figura 6.5 (generalmente al lado de
otras al nivel de suelo). Sin embargo, la simple observación de
muchas de estas casas impone dudas sobre la resistencia
estructural de los pilares frente al embate de las aguas. Otros
mecanismos de convivencia con las crecidas que las ciudades
están adoptando es la ocupación de las áreas de inundación con
actividades como áreas de recreación y parques, para impedir la
ocupación de las áreas de inundación (Figura 6.5).
Figura 6.4. Áreas de riesgo en las ciudades de União da Vitória y Porto União
Figura 6.5. Casas de tipo lacustre para convivir con las crecidas.
Aprovechamiento de la terraza de inundación para parque.
197
6.1.3 Gestión de las inundaciones en la Región
Metropolitana de Curitiba - Brasil
La Región Metropolitana de Curitiba (RMC, Estado de
Paraná, Brasil) posee 2,7 millones de habitantes, y de estos cerca
del 90 % viven en las ciudades. Se constituye de 15 municipios en
un área de cerca de 3.000 km2, ubicada principalmente en la
cuenca del Alto río Iguaçu (figura 6.6). Los municipios más
poblados son Curitiba, Pinhais y Sao José dos Pinhais. En 1992 se
inició un programa de saneamiento ambiental en la región
financiado por el Banco Mundial donde existían componentes de
gestión de inundaciones y de saneamiento.
En el control de las inundaciones fueron definidas tres
etapas: (a) medidas de emergencias que actuaban sobre los
problemas visibles y de gestión inmediata; (b) gestión de las
inundaciones en el área ribereña del río Iguaçu que viene
sufriendo reducción por la invasión de áreas de riesgo; (c) Plan
Director de Drenaje Urbano de la Región Metropolitana.
Las inundaciones sobre la ciudad de Curitiba y región
circundante ocurren debido a la combinación de inundaciones
ribereñas y debido al drenaje urbano de las cuencas urbanizadas,
que inundan el eje principal del río Iguaçu. Este ya está bastante
ocupado al igual que sus afluentes Belém, Atuba y Palmital
debido principalmente a la urbanización de Curitiba y Pinhais.
Figura 6.6. Región Metropolitana de Curitiba en la cuenca del Alto río Iguaçu
(el área marrón representa la mancha urbana).
198
Alternativas de control
Tucci (1996) estudió las alternativas de control de las
inundaciones ribereñas en el río Iguaçu:
a. Sin acción: Esta es la alternativa en que no sería realizada
ninguna acción, por lo tanto, se trata de una solución
descartada, pues los perjuicios potenciales, actuales y
futuros son significativos como para que ninguna acción
sea ejecutada;
b. Zonificación de las áreas de inundación: Esta alternativa
involucra definir las cotas de riesgo de inundación para el
área involucrada, utilizar ese mapa de crecidas para definir
las reglas de construcción y ocupación para las áreas de
alto riesgo e implementarlas en el Plan Director y Código
de Obras de los Municipios.
c. Reservorios: Los reservorios previstos para
abastecimiento de agua en la cabecera del río Irai y en el
río Piraquara deberán amortiguar parte de las crecidas. Se
debe considerar que las cuencas de influencia de estos
reservorios representan una parcela pequeña del área de
drenaje, por lo tanto tiene un efecto limitado,
principalmente si consideramos que los caudales máximos
son más influenciados por las cuencas más urbanizadas.
La construcción de reservorios en los ríos Palmital, Belém
y Atuba, difícilmente, podrían amortiguar las crecidas de
la urbanización ya existente. Los espacios vacíos podrán
permitir la creación de parques para la amortiguación
distribuida a lo largo de estas cuencas. El uso de
reservorios en parques y del abastecimiento de agua podrá
minimizar las crecidas en las cuencas que aún están en
estado rural, como es el caso de los ríos Piraquara, Irai y
Pequeño. Estas acciones se insertan dentro de los
planes de largo plazo.
d. Confinamiento del escurrimiento con diques: Esta solución
involucra la transferencia del volumen de agua del lecho
mayor al lecho menor o para un ancho predefinido. Esta
alternativa seguramente involucra también la mejoría del
escurrimiento en el lecho menor y tiende a crear remanso
para los tramos superiores. Este tipo de sistema debe
contemplar lo siguiente: (1) drenaje del escurrimiento
urbano de las cuencas de contribución lateral; (2) sistema
de bombas para el drenaje forzado de las áreas laterales.
En este caso es necesario prever áreas de amortiguación
para reducir la capacidad de las bombas; (3) sistema de
mantenimiento y operación por los municipios. Este tipo
199
de sistema tiene limitaciones de seguridad para los
diques, exigiendo también un sistema de alerta de
crecidas.
e. Ampliación de la capacidad de escurrimiento: Esta
alternativa involucra la modificación del lecho natural del
río Iguaçu a través del aumento de la sección y/o desnivel
del lecho o la construcción de un canal paralelo que
aumente la capacidad de escurrimiento total del sistema.
Este mismo sistema puede aún combinar el aumento de
la capacidad de escurrimiento con la construcción de
diques laterales en algunos tramos.
La solución consistente en solamente confinar el
escurrimiento dentro del lecho menor, o aún en dos canales,
implicará que la población tenga confianza y ocupe
paulatinamente el lecho mayor de inundación, ya que habrá
reducción de la frecuencia de la inundación. Para las crecidas
de baja frecuencia aún habrá un riesgo de inundación. Con el
desarrollo urbano habrá ocupación de las cuencas aguas arriba
y la densificación en las áreas ya loteadas lo que provocará el
aumento en los caudales de crecida y el aumento de la
frecuencia de las inundaciones. Cuando esto ocurra, no habrá
más espacio para ampliación de las secciones.
201
contemple la legislación sobre la construcción de nuevos loteos,
buscando evitar la ocupación de áreas inadecuadas y la ampliación
de las crecidas naturales.
En la Figura 6.8, se presenta el área de inundación, la
expansión urbana y los dos lechos de los ríos. En la Figura 6.9,
son presentadas fotos generales con el área de inundación del
parque que fue implementado y un área ya implementada.
Descripción
La Región Metropolitana de Porto Alegre (Estado de Rio
Grande do Sul, Brasil; 3 millones de habitantes) se encuentra en el
Delta del río Jacuí y el Lago Guaíba, que posee una cuenca
hidrográfica del orden de 80 mil km2 y cuatro ríos que convergen
en el Delta y, posteriormente, en el Lago. La ciudad de Porto
Alegre, localizada en las márgenes de este sistema, tiene su
área central junto al puerto, dentro del Delta y en el Lago.
202
Existen registros de los niveles máximos de inundación en Porto
Alegre (Figura 2.5) desde 1899, mostrando que ocurrieron
grandes inundaciones ribereñas como la del año 1941 (Figura
6.10). En 1970, fue construido un dique para proteger la ciudad
contra las inundaciones. Este sistema de diques posee varias
subcuencas que drenan para estaciones de bombas. Cuando el río
está con cota arriba de la cota de las calles el escurrimiento
drenado es bombeado hacia el río. Este sistema es ejecutado y
controlado por el Departamento de Desagües Pluviales de la
Municipalidad de Porto Alegre.
El IPH (2001) presentó la primera fase del Plan Director
de Drenaje Urbano de la ciudad de Porto Alegre, dirigido
principalmente al control de las inundaciones en el drenaje
urbano. Fueron desarrollados los siguientes productos: (a)
Medidas no estructurales: aspectos legales y de gestión; (b) Plan
Director de 3 cuencas (recientemente fueron desarrolladas otras 3
cuencas más); (c) Revisión del Sistema de Diques con la
evaluación de las cuencas que drenan hacia los diques; (d) Manual
de Drenaje Urbano para la ciudad.
Figura 6.11. Ciudad de Porto Alegre junto al Delta de Jacuí y del Lago Guaíba.
El escurrimiento de las áreas verdes es bombeado hacia el Guaíba cuando el
dique las protege contra las inundaciones. Las áreas marrones escurren por
gravedad y por conductos bajo presión.
204
Cuenca del Areia – Porto Alegre - Brasil
La cuenca posee dos partes, la superior que drena por
conducto bajo presión encima de la cota de 9 m directo para el río
Gravatai (12 km2), y una segunda parte que es drenada por
bombeo con un área similar a la anterior (donde se encuentra el
aeropuerto). En la Figura 6.12, se presenta una imagen de las dos
partes de la cuenca y en la misma figura son presentadas la
división de la cuenca (11 subcuencas) y el sistema de drenaje
representado. La simulación de los escenarios de Proyecto indicó
los lugares de inundación para diferentes riesgos. El estudio de
alternativa fue inicialmente realizado por prueba y error con base
en los lugares disponibles y en la ampliación de la capacidad de
drenaje. Recientemente, Cruz (2004) revisó el estudio y obtuvo un
nuevo dimensionamiento con base en el modelo de optimización.
En la Figura 6.13, se puede observar las detenciones
elegidas, y en la figura 6.14 los hidrogramas, comparando las
siguientes soluciones: (a) canalización del sistema sin considerar
el costo de ampliación del conducto que pasa por el aeropuerto;
(b) combinación de detenciones y ampliación manteniendo el
caudal aguas abajo. En este caso fueron utilizadas dos
alternativas: optimización de toda la cuenca y optimización por
subcuencas. Se puede observar que el mejor resultado fue
obtenido simulando toda la cuenca.
En la Tabla 6.2, se presenta la comparación entre la dos
principales alternativas, mostrando que la alternativa con
detención cuesta menos y no amplia el caudal hacia aguas abajo.
Se observó que en esta cuenca se utilizaron 77 m3/ha y cerca de 74
% del área de la cuenca con amortiguación. Junto con la detención
se utilizó la ampliación de los conductos para transportar el
escurrimiento hasta las detenciones. La distribución del costo fue
del 79% para aumentar los conductos, 17,7% para las detenciones
y 3,3% para expropiación.
205
Figura 6.12. Imagen (a la izquierda) del conjunto de la cuenca de Areia y
Polder del Aeropuerto e imagen a la derecha de las subcuencas con el sistema
de drenaje simulado (Cruz, 2004).
206
costo quedaría en R$ 303 millones para el valor presente de un
proyecto de 20 años.
207
Objetivos y principios
El Programa de Aguas Pluviales propuesto tiene como
objetivo reducir la vulnerabilidad de la población a las
inundaciones ribereñas, las que ocurren en el drenaje urbano, la
minimización de los impactos ambientales a través de una
política institucional, económica y técnica y un plan de acción
para la gestión de las aguas pluviales en conjunto con los otros
elementos del desarrollo urbano de las ciudades brasileñas. Los
principios son los mismos destacados en el capítulo 5.
Institucional
Los elementos institucionales son la base para conformar
la estructura del desarrollo del programa. Estos elementos se
dividen en: legales, gestión, capacitación y ciencia y tecnología.
Los elementos legales establecen la propuesta de realizar una
legislación que oriente al programa; la gestión establece una base
para que actúen las entidades involucradas en la implementación
del programa; la capacitación y ciencia y tecnología desarrollan el
soporte de personal y desarrollo del conocimiento.
La política de control del drenaje urbano involucra dos
ambientes: externo a la ciudad e interno a la ciudad (ver capítulo
4). Existe una gran interrelación entre los elementos de uso del
suelo, control ambiental y recursos hídricos, tanto internamente en
la ciudad como en el Plan de Cuenca Hidrográfica. El
gerenciamiento de la ciudad es controlado con el monitoreo de lo
que la ciudad exporta para el resto de la cuenca, induciendo ésta a
su control interno, utilizándose los medios legales y financieros.
El proceso interno dentro de las ciudades es una atribución
209
esencialmente del municipio o de los consorcios de municipios,
dependiendo de las características de las cuencas urbanas y su
desarrollo.
211
país a corto plazo, pues no sería viable a todas las acciones
efectivas y no existirían recursos para el financiamiento
del desarrollo del planeamiento y el control simultáneo;
• Las reglas de otorgamiento deben establecer
procedimientos y metas de resultado en el Planeamiento de
las acciones de acuerdo con la clase del río que se esté
planificando.
Inversiones
Las estimaciones de costo se basan en la población y en el
área de las cuencas urbanas. En esta etapa no se dispone de las
áreas de las cuencas urbanas de todas las ciudades para este
análisis y la estimación fue realizada con base en un valor unitario
basado en la población. Este valor varía con las condiciones de
urbanización de las ciudades. Para cuencas urbanas centrales con
gran dificultad de espacio y alta cantidad de obras de transporte
del escurrimiento el valor es del orden de R$ 235,00/hab., mientas
que en cuencas con densidad media y con más espacio los costos
son del orden de R$ 125,00/hab. Para ciudades menores fue
adoptado el valor de R$ 80,00/hab. En las ciudades de la faja A
fueron adoptados para el 35% de la población el costo de áreas
centrales y para 65% de la población el costo de áreas de mediana
densidad. En las ciudades de la Faja B la proporción adoptada fue
del 20 y 80% respectivamente. En las ciudades de la Faja C se
adoptó sólo el valor de densidad media y en las ciudades de la
Faja D se adoptó el valor de baja densidad. En la Tabla 6.5, son
214
presentados los totales estimados para las obras, resultando cerca
de R$ 20,36 billones para todo el programa de obras.
Tabla 6.5. Costos de los Planes y de las obras de control para riesgo de 10
años.
Categoría Clasificación Población Costos Costo Costos
de los en estimados de los totales
municipios millones de las Planes
P= obras R$
población en R$ R$ millones
mil millones millones
A P>500 45,257 7252,4 362,6 7.615,1
B 100 < P < 39,337 5.6215,2 281,25 5.906,5
500
C 20 < P >100 48,155 4.815,5 240,8 5.056,3
D P <20 33,363 2.669,0 133,5 2.802,5
Total 166,112 20362,2 1018,1 21.380,3
215
6.2.2 Inundaciones en la ciudad de Buenos Aires,
Argentina
Buenos Aires y su conurbano (17 partidos que conforman
el denominado “Conurbano Bonaerense”) concentra una
población que se aproxima a 12,5 millones de habitantes, diez
veces superior a las poblaciones de Rosario y de Córdoba (las dos
ciudades que le siguen en términos de concentración urbana). El
área metropolitana de Buenos Aires cubre aproximadamente 700
km2. La región de más alta densidad alberga a casi 15.000
hab/km2 (Maza et al., 2004).
El Conurbano Bonaerense reúne al 24,5% de la población
del país y al 63,3% de la provincia de Buenos Aires. Si se lo
considera en conjunto con la ciudad de Buenos Aires, concentra el
41% de la población total del país, con una densidad media de
población de 2.165,6 hab/km2, conformando la tercera
aglomeración urbana de Latinoamérica. La misma posee un efecto
dominante sobre todo el país. El fenómeno supera incluso la
concentración observada en otras regiones del mundo (
Tabla 6.6).
En la Figura 6.15, se observa la expansion geográfica de
Buenos Aires y de su entorno. Actualmente la densidad media de
población en la capital argentina es de 150 hab/ha y las zonas
verdes alcanzan a 0,6 m2/hab contra los 15 m2/hab recomendados
por la Organización Mundial de la Salud (Clarín, 23-09-00).
Tabla 6.6. Peso de las grandes metrópolis en la población urbana y la población
total de cada país, para el año 1990.
Ciudad Porcentaje sobre la Porcentaje sobre la
población urbana del población
país total del país
Buenos Aires (Argentina) 41 36
Seul (Corea del Sur) 35 26
México (México) 33 24
El Cairo (Egipto) 39 17
Tokio (Japón) 19 15
París (Francia) 21 15
Manila (Filipinas) 29 14
Londres (Reino Unido) 14 13
Bruxelas (Bélgica) 10 10
Lagos (Nigeria) 23 8
(Fuente: World Bank Indicators, 1995).
216
Figura 6.15. Crecimiento de Buenos Aires y del conurbano bonaerense.
(Fuente: Guglielmo, 1996).
220
Efectos colaterales de la urbanización: ascenso del
nivel de agua subterránea
Un fenómeno que adquirió características preocupantes es
el ascenso progresivo de los niveles de agua subterránea en el
conurbano bonaerense. Desde comienzos de la década de los años
80 comenzaron a evidenciarse problemas en las construcciones de
sub-superficie (sótanos, cocheras subterráneas, cámaras, etc.),
debido a anegamientos provocados por el ascenso del nivel del
acuífero freático.
En la región el sistema hidrogeológico está integrado por
un primer acuífero (capa freática) y otro semi libre infrayacente
(Pampeano), que se comportan hidráulicamente como una única
unidad. Por debajo y separados por un estrato de baja
permeabilidad (acuitardo), se localiza un acuífero semiconfinado
(Puelche), principal proveedor de agua para servicio público, uso
industrial y riego hortícola en la región. Completa el perfil
hidrogeológico el acuífero Paraná, localizado a mayor
profundidad (Figura 6.18). La napa freática constituye el
elemento de transición de la recarga meteórica. La trascendencia
del Pampeano radica en que actúa como vía para la recarga y
descarga del subacuífero Puelche subyacente, que es la unidad
hidrogeológica más importante de la zona. El techo del Puelche se
emplaza entre los 25 y 50 m de profundidad (según la posición
geográfica) y su espesor varía entre los 15 y los 30 m.
Pozo
Domestico Municipal
De 25 a 50 m
Contaminación
Domestica e
Industrial
Mala calidad natural
De 15 a 30 m
Sobre-explotado
Intrusión Salina
Salinización
Salinizado
222
población servida con agua corriente, siendo su origen a partir de
perforaciones al sub acuífero Puelche y de agua superficial del
Río de la Plata, con tratamiento de potabilización. La población
servida con alcantarillado cloacal alcanzaba al 22,7 % del total de
las viviendas.
En el año 2001 aproximadamente un 30 % del total de las
viviendas del distrito contaban con alcantarillado cloacal, mientras
que un 98 % de la población contaba con agua corriente. El
aumento de este último porcentaje se realizó a expensas de la
importación de agua al sistema desde el río de la Plata. Desde
mediados del año 1997 se observó en el municipio de Lomas de
Zamora, como así también en otros sectores del conurbano
bonaerense y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, un
paulatino ascenso de la primera napa freática de agua, llegando en
algunos sectores a adquirir características de una verdadera
emergencia hídrica y sanitaria.
De acuerdo a Ballester y Álvarez (2001), desde 1998 y
hasta el año 2001 se instalaron en el municipio de Lomas de
Zamora (a modo de paliativo) aproximadamente unas 800 bombas
de extracción, que deprimieron el nivel freático mediante bombeo
controlado.
223
Figura 6.19. Inundación en la región céntrica de la ciudad de Córdoba (calle La
Pampa).
23
227
Figura 6.23. Cuenco de detención ejecutado en un emprendimiento comercial
privado. Córdoba, Argentina (Fuente: Toya et al., 2003).
229
visión de integralidad de la cuenca, a través de acciones
participativas, con intervención, entre otros, del estado
municipal y ONG’s.
230
Figura 6.25. Red de Accesos a Córdoba (RAC), Argentina.
231
Reservorio
Chachapoya
OO1 N
JJ
KK OO
PP
QQ SS1 O E
RR
S
TT
SS
WW
UU XX YY1
VV
YY
ZZ ZZ1
0 400 800 1200
0 200 400 600 800
234
Figura 6.29. Canal interno durante la tormenta de diciembre de 2003.
Obsérvese el efecto producido por el inadecuado proyecto hidráulico de la
transición.
Figura 6.30. Estado del canal central del Arco Noreste luego de la tormenta de
diciembre de 2003.
235
La severidad de los problemas viales e hidráulicos derivó
en la realización de un estudio que tuvo por objetivo recomendar
eventuales acciones a ser implementadas sobre las cuencas de
drenaje a fin de lograr un mayor control de los caudales
evacuados, como así también recomendar eventuales
modificaciones de las obras de drenaje existentes a fin de lograr
un mejor funcionamiento hidráulico de las mismas.
El estudio implicó análisis hidrológicos y la verificación
del comportamiento del sistema hidráulico para la tormenta de
2003 y para tormentas con tiempos de retorno de 25 y 100 años
(Bertoni et al., 2005). No existiendo datos de caudales o niveles
que permitan calibrar con certeza a los modelos empleados, el
análisis del coeficiente de escurrimiento (relación lámina
precipitada vs. escurrida) se impuso como un control adicional a
las informaciones recabadas entre los vecinos. Los estudios
realizados permitieron inferir que en situaciones críticas este
coeficiente oscila entre 0,70 y 0,78. A su vez, se dedujo que las
cuencas urbanas estudiadas producen caudales picos específicos
promedio (caudal pico por unidad de superficie) en el orden de 55,
85 y 115 l/s-ha asociados a tiempos de retorno de 25, 100 y 150
años respectivamente
El estudio propuso adoptar medidas junto a los niveles
provincial y municipal de modo de congeniar la capacidad de
producción y transferencia (volumen y caudales) de las cuencas de
aporte con las limitaciones físicas de los canales de dreanje del
sector. También fue recomendado encarar progresivamente tareas
de mejora en ambos canales.
Introducción
La ciudad de Santa Fe (Provincia de Santa Fe, Argentina;
población de 400.000 habitantes) se localiza en la región central
del litoral fluvial argentino, a la vera de dos importantes sistemas
hídricos: el del río Paraná y el del río Salado (Figura 6.31). En el
año 2003 se produjo una crecida del río Salado que superó
ampliamente a todas las antecedentes. La misma tuvo
connotaciones dramáticas en la ciudad de Santa Fe y zonas
aledañas, provocando muertes y cuantiosos daños materiales. El
fenómeno afectó también a diversas zonas rurales de la provincia,
afectando seriamente a las actividades que se desarrollan
habitualmente en la cuenca santafesina del río Salado. En la
región de influencia directa de la ciudad de Santa Fe se localizan
236
500.000 habitantes, muchos de ellos afectados por una situación
de pobreza. Al momento de producirse la inundación de 2003 el
desempleo en la región era del 23,5%, siendo que el 53% de los
hogares se encontraba en situación de pobreza.
La percepción del problema de las inundaciones de los
sectores ribereños de la ciudad de Santa Fe ha sido asociada
históricamente al comportamiento del río Paraná. A partir de
créditos internacionales por U$S 25 millones el gobierno del
Estado de Santa Fe construyó, a lo largo de los años 90, un
sistema de protección constituido por diferentes diques y
terraplenes que encerraron a la ciudad y sus adyacencias. Este
sistema dio cierta independencia a la ciudad de las crecidas del río
Paraná. Sin embargo, el mismo se mostró inadecuado frente a las
crecidas del río Salado.
Figura 6.32. Afluentes y áreas de aporte en la cuenca inferior del río Salado.
Provincia de Santa Fe (Paoli, 2004).
238
Crecida del río Salado de 2003
Durante los meses de octubre de 2002 a marzo de 2003 se
produjeron importantes precipitaciones en la cuenca del Salado
santafesino. Estas precipitaciones fueron muy superiores a la
media de los registros y produjeron un aumento significativo del
contenido de humedad en el suelo. En consecuencia, una parte
importante de la lluvia fue transformada en escurrimiento
superficial.
En los tres primeros meses del 2003 se registraron crecidas
cuyos picos superaron los 1.000 m3/s, ocasionadas por
precipitaciones ocurridas en distintos sectores de la cuenca.
Durante el mes de abril de 2003 continuó precipitando con regular
intensidad. La anomalía positiva de precipitación a lo largo del
mes de abril de 2003 fue de 200 mm (Figura 6.33).
239
Durante los días 23 a 25, y 28 y 29 de abril, se produjeron
las tormentas que dieron origen a la crecida, cuyo máximo de
3954 m3/s se registró el 30/04/03. Entre los elementos que
contribuyeron en la formación del pico cabe citar: (i) el estado de
saturación del suelo en gran parte de la cuenca; (ii) la baja
evapotranspiración en ese período; (iii) la ocurrencia de sucesivas
crecidas anteriores, que hicieron que el río mantuviese un nivel
alto, con caudales superiores a los 500 m3/s.
La Figura 6.34 ilustra hidrogramas correspondientes a
tres crecidas del río Salado. Es posible observar que en el caso de
la crecida de 2003 las ramas de ascensión y de recesión
presentaron gradientes mucho más elevados.
Un estudio basado en un análisis estadístico que combinó
marcas históricas y registros sistemáticos disponibles (Bertoni et
al., no publicado) indicó que el tiempo de recurrencia de esta
crecida es de 800 años. Esta recurrencia difirió de la estimada con
base en series estadísticas más cortas, aparentemente
representativas, pero que no contemplaron la ocurrencia de
eventos significativos verificados hacia fines del siglo XIX e
inicio del siglo XX.
4500
4000
3500
3000
2500
2000
1500
1000
500
0
E F M A M J J A
Meses
240
Avda. de Circunvalación Oeste. Este conjunto de diques debía
proteger a la ciudad de las crecidas del río Salado.
Para el borde oriental del río Salado el sistema de
protección por terraplenes tuvo algunas características
particulares, resultando de la combinación de una obra de tipo vial
e hidráulica. La protección fue concebida en tres partes, asociada
a la Avenida de Circunvalación Oeste de la ciudad, construida en
el período 1995-1997. Hasta el año 2003 sólo habían sido
ejecutadas las dos primeras partes de este sistema vial-hidráulico
(tramos I y II, próximos a la desembocadura del río Salado
(Figura 6.35b). En consecuencia, durante la crecida de 2003 la
ciudad presentó una sección no protegida, a partir del extremo
norte del sistema de defensa.
(a) (b)
Figura 6.35. (a) ciudad de Santa Fe en la desembocadura del río Salado sobre el
sistema Paraná ; (b) Sector inundado en abril de 2003 (Fuente: El Litoral,
www.litoral.com.ar).
243
Figura 6.36. Inondation dans les quartiers ouest de la ville de Santa Fe,
Argentine (Source: Paoli, 2004).
244
Salado cuyo caudal máximo observado fue de 2.430 m3/s. Entre
ambas crecidas se produjo un ciclo relativamente seco de 59 años
de duración. Dentro del mismo las crecidas del río Salado no
superaron los 800 m3/s (a excepción del año 1946 en que superó
escasamente este umbral). Ello fue un elemento decisivo para que
el conjunto de tomadores de decisión de aquellos años
desconsiderara la necesidad de planificación del desarrollo urbano
de la ciudad de forma compatible con las características de la
planicie de inundación del río Salado. A la luz del conocimiento
actual, ello constituyó una clara falencia de formación y/u
orientación por parte de los tomadores de decisión, la cual
condujo a errores de planificación.
Otro hecho a destacar, de significativa importancia para
comprender la evolución de la urbanización de áreas inundables
en la ciudad de Santa Fe, ha sido el paulatino arraigue de la idea
de solución a los problemas de las inundaciones con base
exclusivamente en la ejecución de obras de ingeniería.
El conjunto de falencias indicadas condujo a decisiones
inapropiadas, tales como, entre otras, la instalación tanto del
nuevo Hospital de Niños como de la Estación Transformadora de
Energía, en áreas signadas por su alto riesgo hídrico.
El proyecto y ejecución del terraplén de Defensa Oeste
correspondiente a la Av. de Circunvalación, efectuado en el año
1996, sin el acompañamiento de la implementación efectiva de
diversas medidas no estructurales, tales como planes de alerta y de
contingencia, son un ejemplo de visión basada exclusivamente en
la ejecución de obras de ingeniería.
Finalizando esta síntesis sobre la evolución de la
urbanización del sector oeste de la ciudad de Santa Fe, se presenta
en la Figura 6.37, a modo de ilustración, una comparación de los
distintos niveles de desarrollo urbano de la ciudad a lo largo del
tiempo. En las ilustraciones se indica la presencia de las obras de
infraestructura (caminos, ramales ferroviarios, etc.) a medida que
las mismas se fueron ejecutando en el tiempo. Estas obras se
indican en el color correspondiente al año de evaluación de la
urbanización. También se incluyen las curvas de nivel del terreno,
elemento que da cuenta del avance de la ciudad sobre las zonas
topográficamente más deprimidas.
Por su parte, la Figura 6.38 permite comparar la vista del
sector oeste ilustrada por la Foto Nº 1 con su similar actual. Lo
propio ocurre respectivamente en la Figura 6.39 en relación con
la Foto Nº 2.
245
N
5
,7
3
1 ,0 1
5
1 5
,2
6
0
,5
7
1
TE
RR
5
,2
6
1
AP
0 1
,5
2
1 5 1
,7
3 ,0
5
LE
N
5
,2
6
1
0 1
,5
2
1 0
5
,7
3
5
,2
1 5
,2
1 0
,5
2
1 5
,7
3
1
,0 1
5
1 5 1
.2
6 0
,5
7 1
0
,5
7
5
,2
6
1
5
,7
3
1
5
,2
1 5
,2
1 0
,5
2
1
5
,7
3
1 1
,0
5 0
,5
7
1 1
0
,5
7
5
.2
6
1
5
,2
6
1
0
,5
7
1
,0 1
5
1 5
,2
6
1895 5
,7
3
1
0
,5
7
1
,0
5
1 0
,5
7
1 0
,5
7
1
5
,2
6
1
5
,7
3
1
1916 0
,5
7
1
0
,5
7
1
0
,5
7
1 5
,7
3
1 ,0
5
1 5
,2
6
1
,0
5
1 1
5
,2
6 0
,5
7
1
1907 0
,5
7
1
5
,7
3
1 1
,0 1
5 5
,2
6
0
,5
7
1
TE
RR
0
,5
7
1 5 1
,7
3
1 ,0
5 1
5
,2
6 1
0
,5
7
AP
LE
5
,7
3
1 ,0 1
5
1 5
,2
6
N
0
,5
7
1
TE
RR
5
,2
6
1
AP
5
,7
3
1 ,0
5
1 0
,5
7
1
5
,2
6
1
LE
0 1
,5
2
1 7
3
,0
5
N
5
,7
3
1 ,0 1
5
1 5
,2
6
0
,5
7
1
TE
RR
AP
5
,2
6
1
LE
0 1
,5
2
1 0
5
,7
3
N
5
,2
6
1
0 1
,5
2
1 5 1
,7
3 ,0
5
5
,2
1 5
,2
1 1
0
,5
2 5
,7
3
1
,0 1
5
1 5 1
.2
6 0
,5
7 0
,5
7
1
5
,2
6
1
5
,2
1 5
,2
1 0
,5
2
1 5
,7
3
1
,0 1
5
1 5 1
.2
6 0
,5
7 1
0
,5
7
5
,2
6
1
5
,7
3
1
,0
5
1 1
5
,2
6 1
0
,5
7
2005 0
,5
7
1
0
,5
7
1
,0
5
1 1
5
,2
6
5
,7
3
1 0
,5
7
1
5
,7
3
1 ,0 1
5
1 5
,2
6
0
,5
7
1
TE
RR
AP
LE
N
5
,2
6
1
0 1
,5
2
1 5 1
,7
3 ,0
5
AUTOPISTA
A
ST
PI
TO
AU
5
,2
1 5
,2
1 0
,5
2
1 5
,7
3
1
,0 1
5
1 5 1
.2
6 0
,5
7 1
0
,5
7
5
,2
6
1
246
Figura 6.39. Transformación urbana: comparación de dos imágenes de un
mismo sector durante la década del 30 y en el año 2005.
249
erosión. La abertura de una brecha entre éste y el cuerpo de la
presa produjo la disminución del volumen de almacenamiento de
la presa. Cuando el volumen acumulado en la Presa III exigió la
entrada en operación del vertedero lateral de emergencia, el
mismo se encontró obstruido por camionadas de escombros
depositadas en él, y hasta un chasis abandonado en su cuenco.
Esto produjo la sobre elevación por varios minutos del agua del
embalse por sobre la cresta del terraplén, erosionando fuertemente
sus paredes y debilitando el cuerpo de la presa. Simultáneamente,
la presión del agua en la embocadura del vertedero provocó la
remoción abrupta de los escombros depositados, generando una
primera y sorpresiva “onda de crecida”. La misma sobrepasó
inmediatamente el Cierre IV, inundó abruptamente el Barrio
Constitución y continuó su rumbo por la calle canal hacia la
Laguna.
Debido al incesante escurrimiento, uno de los estribos de
la Presa III cedió, provocando la segunda onda de crecida. Pocas
horas después rompió el “terraplén de la vía” sobre dicha presa,
generando la tercera onda de crecida. Luego de 48 hs. los
embalses quedaron vacíos, habiendo circulado por ellos un
volumen estimado en 1.000.000 de m3 de agua. Este volumen de
agua colmó la laguna Chiquichano a niveles inusuales, hecho que
sumado al agua de lluvia acumulada en el casco urbano, produjo
la inundación de una enorme superficie urbana anegada (Figura
6.41). La situación de inundación se agravó por el endicamiento
producido por la ruta 25.
Si no hubieran existido las presas durante la crecida, los
picos de caudales en el Barrio Constitución hubieran sido algo
menores. Pero el volumen de agua ingresado a la laguna hubiera
sido el mismo y en un período de un día y medio en lugar de los
cuatro días que demoró por efecto de retardo de las presas, aún
fallidas. Esta situación hubiera generado crecidas de magnitud
mayores en populosos barrios alrededor de la Laguna.
250
Figura 6.41. Imagen del Sector Mil Viviendas, dentro del Sistema del Cañadón
del Parque Industrial, Trelew, durante la tormenta extraordinaria del 24/25 de
abril de 1998.
251
6.2.7 Inundación repentina en San Carlos Minas,
Argentina.
La pequeña localidad de San Carlos Minas (1.000
habitantes) está ubicada en el estado de Córdoba, región central de
Argentina. El pueblo se desarrolla en la margen de arroyo
Noguinet. Su cuenca (260,4 km2), cubre un área caracterizada por
colina y fuertes pendientes. En enero 1992 el pueblo fue
devastado por una crecida repentina (Barbeito et al., 2004).
La tormenta convectiva que dio origen a la crecida
precipitó 240 mm en 6 h en la cuenca superior, 140 mm en 7 h en
la cuenca media y 204 mm en 6 h en la cuenca baja. La intensidad
media de la lluvia fue calculada en 180 mm/h. En San Carlos
Minas la inundación activó un sistema de paleocauces antiguos
(Figura 6.42). La capacidad del curso fue superada
repentinamente y, por consiguiente, el pueblo fue inundado en
pocos minutos. Al mismo tiempo grandes árboles arrastrados por
la corriente fueron acumulados conjuntos a un puente ubicado en
la entrada del pueblo. La capacidad de proyecto del puente era de
800 m3/s pero este valor fue reducido drásticamente por la
obstrucción de los árboles arrastrados. Esto creó un efecto de
dique que algunos minutos después causó una onda frontal,
similar a una onda de rotura de presa. Esta inmensa onda devastó
el pueblo con un caudal máximo del orden de 1.900 m3/s. La
consecuencia fue de 30 muertos, 40 personas desaparecidas y
pérdidas materiales importantes. La Figura 6.43 ilustra el nivel
máximo del agua en la sección aguas arriba del puente. La Figura
6.44 indica algunas de las pérdidas producidas por el paso de la
crecida sobre el pueblo.
252
PALEOCAUCE
PUEBLO
DESBORDES
LATERALES
DESBORDE DE MEANDRO E
INGRESO FRONTAL DE LA LECHO
CRECIDA ORDINARIO
Figura 6.42. Camino seguido por la crecida repentina sobre San Carlos Minas,
en enero de 1992. (Fuente: Barbeito et al., 2004).
253
Nivel alcanzado por el agua
Figura 6.43. Sector inmediato aguas arriba del puente. Evento de enero de 1992 en
San Carlos Minas, Argentina (Fuente: Barbeito et al., 2004).
Figura 6.44. Daños sobre viviendas en un barrio de San Carlos Minas, Argentina.
Inundación de enero de 1992.
254
caracterizaron por ser abundantes y de corta duración, con montos
variables entre 60 y 250 mm y con duraciones próximas a 2 h,
localizadas fundamentalmente en las Cumbres de Gaspar.
Mediante un estudio hidrológico basado en los escasos
datos existentes fueron ajustados los caudales para distintos
períodos de recurrencia (Tabla 6.7). Como control de estos
estudios se encaró el procesamiento de datos obtenidos en el
Dique Pichanas (receptor final del aporte de la cuenca), donde se
había registrado el ingreso de la crecida a lo largo del tiempo. Con
ello se confirmaron los valores de caudales y recurrencia
calculados.
Tabla 6.7. Caudales máximos asociados a diferentes recurrencias. Arroyo
Noguinet en San Carlos Minas, Argentina.
Recurrencia Caudal máximo
[años] [m3/s]
50 750
100 980
500 1.200
1.500 1.500
255
(a) (b)
Figura 6.45. Foto aérea (a): año 1970 y (b) año 1998, luego de efectuada la obra
de rectificación del meandro natural (“canalización”) (Fuente: Barbeito et al.,
2004).
256
• Reconstrucción de la Ruta Provincial Nº 15 en las zonas
afectadas.
• Sistematización del cauce, aguas abajo desde la salida del
canal hasta la desembocadura en el río Salsacate.
• Reacondicionamiento de la cañada de desagüe sobre el
antiguo brazo de crecidas.
• Reacondicionamiento de las acequias de riego en zonas
afectadas de acuerdo a la nueva urbanización.
• Construcción de un nuevo sistema de alimentación,
almacenamiento y conexión con la red existente de agua
potable.
• Sistema de alimentación de agua para futuro balneario.
257
El grado que adquirió la catástrofe, como así también el
nivel de inversiones posteriores en la búsqueda de soluciones, es
un claro ejemplo de la falta de planificación en acciones tanto
previas a un evento crítico como “a posteriori” del mismo. En
efecto, durante la urbanización del pueblo ni el estado provincial
ni el nacional dedicaron esfuerzos con el fin de reorientar la
ubicación del mismo. Sin embargo, las inversiones realizadas “a
posteriori” demostraron un alto grado de aversión al riesgo hídrico
por parte de las autoridades.
La adopción de una medida estructural de la envergadura
de la realizada (proyectada para un tiempo de recurrencia de 5.000
años) no se compatibiliza ni con las arcas públicas ni con la
existencia de numerosas urbanizaciones serranas sujetas a
amenazas similares, sobre las cuales poco o nada fue realizado
desde entonces.
Figura 6.47. Fotografía del Original Dique San Roque, a 33 mts de embalse.
(Fuente: Zuleika Gore-Edwards Bialet Laprida).
259
Entre los aspectos de la vulnerabilidad del sistema, que
hacen del embalse San Roque un prototipo para el estudio de
crecientes lacustres, cabe citar:
• A orillas del espejo existen varias poblaciones turísticas,
destacándose por su importancia la ciudad de Villa
Carlos Paz, que posee 45.000 habitantes estables.
Durante la temporada turística estival esta ciudad triplica
su población. Las crecidas de los ríos que aportan al
embalse ocurren en verano, en coincidencia con la
presencia del turismo.
• Buena parte de la actividad de los visitantes se desarrolla
en el embalse y sus afluentes, o en su periferia.
• La cota de expropiación efectiva alrededor del perilago
fue fijada por el municipio de Villa Carlos Paz en un
valor más bajo (36 m) que el originalmente considerado
en el proyecto del embalse (38 m). Aun así la cota de 36
m es violada a menudo, lo cual demuestra la falta de
control tanto del municipio como de la autoridad
provincial del agua.
• La capacidad de vertido del embalse es reducida, para
proteger, como ya fuera citado, a la ciudad de Córdoba.
• Actualmente el embalse presenta un fuerte proceso de
eutrofización, debido fundamentalmente a la carga
orgánica domiciliaria de las localidades ubicadas sobre el
perilago, que no poseen tratamiento de efluentes, y al
aporte de fósforo originado por los incendios rurales que
se producen durante el período de sequía.
En las últimas décadas la precipitación pluvial sobre el
área de aporte ha crecido notoriamente, en tanto que, desde la
privatización del servicio de abastecimiento de agua a la ciudad de
Córdoba, el manejo del embalse tiende a mantener elevado su
nivel como medida de control de la eutrofización. Ambas causas
han dado origen a la una tendencia incremental de la altura del
cuerpo de agua de casi 8 cm/año (Caamaño y Catalini, 2002).
Consecuentemente, se ha potenciado la amenaza y el riesgo de
inundación de márgenes, hecho que se ha convertido en un
problema serio en los últimos años. Hacia fines de 1999 se
produjo la mayor inundación ya registrada en el perilago,
abarcando importantes sectores de la ciudad de Villa Carlos Paz
(Figura 6.48). Ello dio origen al estudio de escenarios críticos
probables y a la delimitación de las áreas bajo riesgo hídrico de
inundación. Este trabajo fue desarrollado por Caamaño y Catalini
(2002) y Catalini (2003).
260
Figura 6.48. Inundación de la ciudad de Villa Carlos Paz (1999), Argentina, en
el perilago del dique San Roque.
261
Determinación de la cota inicial del embalse
Los resultados obtenidos mostraron que el embalse
presenta una tendencia incremental de su altura, hecho que
imposibilitó determinar una cota media a partir de la serie diaria.
El análisis de los valores máximos, medios y mininos anuales se
presenta en la Figura 6.49. La misma permite apreciar que la
tendencia incremental presentada en la serie diaria, se observa
también en los máximos, medios y mínimos anuales. Se observa
un incremento mayor en las cotas mínimas (que alcanza 9,9
cm/año). Para las cotas máximas se mantiene la tendencia
observada en los valores diarios. De mantenerse este
comportamiento, el mismo provocará una disminución del rango
existente entre las cotas máximas y mínimas (del orden de los
6,75 m). Considerando todos estos aspectos, se adoptó como cota
inicial del embalse para las simulaciones la correspondiente al
labio del vertedero (h0=35,30 m).
262
válvulas. Con base en estos supuestos fue realizado el mapa de
riesgo.
Superficies Inundables
Con base en datos batimétricos y de curvas de nivel fueron
estimadas las superficies del espejo de agua y del perilago para los
distintos niveles de riesgo asignados, dando ello origen al Mapa
de Riesgo Hídrico para el perilago del embalse San Roque (Figura
263
6.50). Mediante el empleo de imágenes satelitales actualizadas
fue obtenido el valor correspondiente a la superficie urbanizada de
la ciudad de Villa Carlos Paz (850 Ha), el cual fue adoptado como
valor referencial de los porcentajes de área urbana con riesgo ante
eventos hidrológicos críticos. A su vez se determinaron otros
parámetros de interés relacionados a las superficies inundables
(Tabla 6.9).
El mapa de riesgo del embalse San Roque permite advertir
que la cota de edificación mínima adoptada en los últimos años
(36 m) resulta excesivamente baja para buena parte de la ciudad
de Villa Carlos Paz. Ello indica la necesidad de adoptar en forma
efectiva aquella cota originalmente considerada en los estudios del
embalse (38 m). La adopción de esta cota no disminuiría el riesgo
en las zonas ya construidas de Villa Carlos Paz, pero impediría el
aumento del problema en la ciudad y serviría también de base para
todos los nuevos asentamientos que se desarrollan en otras
comunas linderas al embalse.
El espacio inundable del perilago entre las cotas 36 y 38 es
de 200 Ha, de las cuales aproximadamente 94 Ha corresponden a
la actual área urbana de Villa Carlos Paz. Ello representa el 47 %
de la zona de inundación potencial, por lo que fijando la cota 38
como limite inferior de urbanización se mantendrían libres de
riesgo aproximadamente 106 Ha.
264
Figura 6.50. Mapa de Riesgo Hídrico con recurrencia asociada para la ciudad
de Villa Carlos Paz (Fuente: Catalini, 2004)
265
6.3 Inundaciones urbanas en Centro
América
Centro América presenta el 54 % de su población
concentrada en áreas urbanas, la mayoría de las cuales presenta
serios problemas asociados al drenaje urbano. La ocurrencia de
tormentas severas, el desarrollo incontrolado de sus áreas urbanas,
con fuerte tendencia a la aplicación exclusiva del concepto
sanitarista (higienicista) de conducción rápida de las aguas hacia
aguas abajo, las deficiencias en la infraestructura urbana y una
marcada presencia de residuos sólidos en la vía pública,
conforman un panorama que resulta en la recurrente ocurrencia de
inundaciones urbanas.
A continuación se presentan aspectos de la problemática
correspondiente a la región metropolitana de San Salvador
(AMSS) y a la ciudad de Managua (Nicaragua).
267
El 1º de octubre de 2005 el sistema atmosférico engendró una
zona de depresión (1008 milibares) en la región costera pacífica
de El Salvador, favoreciendo el desplazamiento de humedad hacia
el territorio nacional. La Zona de Convergencia Intertropical
generó desde la mañana de ese día lluvias y fuertes chaparrones
sobre todo el territorio de El Salvador, principalmente en la franja
central de las áreas costeras.
A lo largo de una semana la tormenta "Stan" produjo
importantes precipitaciones; para el AMSS el total de lluvia en 6
días fue superior a 500 mm (Figura 6.52). Según SNET (2005) la
precipitación media correspondiente al mes de octubre es de 205
mm. La sucesión de inundaciones y de deslaves de tierra
producidos en los 14 municipios que conforman el AMSS
resultaron en 65 personas fallecidas y un gran número de
desabrigados. La Figura 6.53 ilustra el fenómeno en el sector
urbano.
268
Figura 6.53. Inundación en San Salvador durante la tormenta « Stan ». (Fuente:
OPAMSS, 2005).
269
Algunas fuentes de información han asociado casi
exclusivamente esta situación al cambio climático global. Aunque
la severidad climática en la región de América Central haya
constituido una materia destacada, las reales causas de los
problemas observados se asocian a un conjunto de los factores
sociales, técnicos y de gestión.
Según destacado por Cruz y Molina (2004), la red de
drenaje de aguas lluvias del AMSS sufre de una seria de
problemas. Entre ellos tiene citar la inexistencia de una institución
legalmente responsable de la planificación, limpieza y
mantenimiento general, razón por la cual la red se encuentra
actualmente muy deteriorada, funcionando en condiciones
deficientes. El Ministerio de Obras Publicas ha sido el responsable
del mantenimiento parcial del sistema, como parte de la red
relativa a la red pública. Sin embargo, a partir del año 2000
comenzó un proceso gracias al cual el Ministerio ha ido
progresivamente desentendiéndose de esta problemática.
El sistema de conductos subterráneos del AMSS, casi en
su totalidad está constituido por conductos de concreto de sección
circular. Entre los problemas identificados en la red de drenaje
cabe citar graves deficiencias estructurales, incapacidad
hidráulica, conexiones cruzadas de aguas negras y de las aguas
industriales (Figura 6.55), proyectos inadecuados, cambios de
diámetros de mayores a menores en dirección a aguas abajo y
pozos de visita sellados por el pavimento de las calles.
271
a. vista de una de las cámaras de a (b) vista interna del conducto de
acceso al dispositivo regulador. regulación, con marcas de niveles
máximos luego de ocurrida la
tormenta Stan (octubre 2005).
Figura 6.56. Dispositivo de regulación por conducto (Urbanización Paso
Fresco).
273
(c) el replanteo del sistema de control adicionando un
sistema de infiltración/exfiltración mediante la
realización de una trinchera de material poroso y de
perforaciones en las paredes del conducto empleado
como sistema de regulación subterráneo.
277
900.00
800.00
700.00
600.00
500.00
Q [l/s]
400.00
300.00
200.00
100.00
0.00
00:00 00:30 01:00 01:30 02:00 02:30 03:00
t
Tr = 10 años Sist. Rural Tr = 10 años Sist. Sanitarista Tr = 10 años Sist. Existente Tr = 10 años Sist. d = 30 cm Tr = 10 años Disp. Inf.
Figura 6.59. Hidrogramas de salida para todos los escenarios ensayados (Tr =
10 años).
En otras palabras, la función de los dispositivos de control
del escurrimiento propuestos hace que el aumento de la
recurrencia de las tormentas se traduzca en un aumento de la
permanencia de los caudales máximos y no en un aumento de
estos últimos, tal como es habitual observar en las áreas urbanas
(Figura 6.60).
500.00
450.00
400.00
350.00
300.00
250.00
200.00
150.00
100.00
50.00
0.00
00:00 00:30 01:00 01:30 02:00 02:30 03:00
Tr = 2 años Q [l/s] Salida a red Tr = 5 años Q [l/s] Salida a red Tr = 10 años Q [l/s] Salida a
Tr = 20 años Q [l/s] Salida a red Tr = 50 años Q [l/s] Salida
279
costa.
• Debilidad en el control urbano por la falta de aplicación y
cumplimiento de las leyes y reglamentos urbanísticos, así
como la no actualización de las mismas que propician el
crecimiento anárquico de la ciudad.
• Déficit de viviendas
• Limitada cobertura de los servicios básicos en los sectores
habitacionales espontáneos.
• Limitaciones en el Servicio de Recolección de Basura.
280
Figura 6.63. Volumen de sedimentos recolectados en la red de micro presas de
la ciudad de Managua (Fuente: Sarria Duarte, comunicación personal, 2005).
281
Referencias
282
A.Colin, Paris, 268 p.
IPH, 2001. Plano Director de Drenagem Urbana de Porto Alegre. Instituto de
Pesquisas Hidráulicas. DEP Departamento de Esgostos Pluviales
Prefectura Municipal de Porto Alegre. 5 volumenes.
JICA, 1995. The master study on utilisation of water resourses in Parana State
in the Federation Republic of Brazil. Pectoral Report vol. 11. Flood
Control.
MAZA, J. (2004). Inundaciones en los grandes centros urbanos, Capítulo 5 in:
Bertoni, J.C., Inundaciones Urbanas en Argentina, 2004, 270 p.
OPAMSS, (2005); Compendio de Informaciones sobre el AMSS, para
ejecución deo Contrato 054.2005-SER
PDDURM, 2002. Plano Director de Drenagem urbana da Regiâo
Metropolitana de Curitiba Volumen: medida não-estructurais.
SUDHERSA e CH2MHILL do Brasil Servicios de Engenharia Ltda..
PAOLI, C.U. (2004). Inundaciones ribereñas en el tramo del Parana Medio.
Cap. 4 in: Bertoni, J.C., Inundaciones Urbanas en Argentina, 2004, 270 p.
PME, 1983. Lei n. 1790. Prefeitura Municipal de Estrela 3p.
PME, 1981. Lei n. 1707. Prefeitura Municipal de Estrela 10p.
REZENDE, B e TUCCI, C.E.M, 1979. Análise hidráulica e hidrológica dos
problemas de inundação urbana na cidade de Estrela. RS. Relatório
Técnico, p. 29
SERRA, J.J., MALNERO, H., SAINZ TRÁPAGA, J. Y CHACHERO, M.
(2002). Aspectos más relevantes de la problemática hídrica en el valle
inferior del río chubut (UNPSJB, Trelew, Chubut). XVIII Congreso
Argentino de la Ciencia del Suelo; Puerto Madryn.
SERRA, J.J. (2004). Urbanización e Inundaciones en Sistemas Hídricos del
Centro de la Región Patagónica, Capítulo 6 in: Bertoni, J.C.,
Inundaciones Urbanas en Argentina, 2004, 270 p.
SNET (2005). Informaciones colectadas para el desarrollo del contrato
054/2005-SER. Servicio Nacional de Estudios Territoriales (no
publicado).
SUDERSHA, 2002. Medidas nâo-estructurais. Plano Director de Drenagem
Urbana da Regiâo Metropolitana de Curitiba. CH2MHILL. Emgenharia
do Brasil Ltda..
TOYA, M.; RAHMANNE, I. OLIVERA, S. Y BERTONI, J.C. (2003). Gestión
de cuencos de retardo en el sistema de drenaje pluvial urbano de
Córdoba. Poster. XIII Congreso Argentino de Saneamiento y Medio
Ambiente. AIDIS. Bs. Aires. Argentina.
TUCCI, C.E.M 1996. Estudios Hidrológicos e Hidrodinâmicos no rio Iguaçu
na. RMC. COMEC/PROSAM, 2 vols
TUCCI, C.E.M; VILLANUEVA, A, 1997. Controle de enchentes das cidades
de união da Victória e Porto União. CORPRERI, 117 p.
TUCCI, C.E.M. Y BERTONI, J.C. (ORG.) (2004), Inundações Urbanas na
América do Sul. Ed. GWP-SAMTAC, OMM, ABRH. ISBN:85-88686-
07-4. 471 p.
TUCCI, 2005. Proposta do Plano Nacional de Águas Pluviais. Ministerio das
Cidades Brasilia 120p.
Inundaciones. San Salvador.
WORLD BANK (1995). 1995 World Development Indicators, N.Y. USA.
283
A
Anexo
Conceptos y glosario
A.1 Sistema de Drenaje: Los sistemas de drenaje se clasifican:
en la fuente, microdrenaje y macrodrenaje. El drenaje en la fuente
es definido por el escurrimiento que ocurre en el lote, condominio
o emprendimiento individual, estacionamientos, parques y paseos
públicos.
El microdrenaje es definido por el sistema de conductos
pluviales o canales a nivel del loteo (o lotificación) o de la red
primaria urbana. Este tipo de sistema de drenaje es proyectado
para atender al drenaje de precipitaciones con riesgo moderado.
El macrodrenaje involucra los sistemas colectores de
diferentes sistemas de microdrenaje. El macrodrenaje involucra
áreas de por lo menos 2 km2 (o 200 hectáreas). Estos valores no
deben ser tomados como absolutos porque la malla urbana puede
poseer las más distintas configuraciones. Este tipo de sistema debe
ser proyectado para acomodar las precipitaciones superiores a las
del microdrenaje con riesgos de acuerdo con los perjuicios
humanos y materiales potenciales.
Uno de los puntos que han caracterizado este tipo de
definición ha sido la metodología de estimación, ya que el Método
Racional es utilizado para estimación de caudales en el
microdrenaje, y los modelos hidrológicos que determinan el
hidrograma del escurrimiento son utilizados en el macrodrenaje.
Las simplificaciones aceptadas para el dimensionamiento en el
método Racional pueden ser utilizadas para cuencas del orden de
2 km2, que representa la restricción definida anteriormente.
285
dimensionada para condiciones de régimen permanente y
verificada en régimen no permanente.
1
T= (a.1)
p
Pn = 1 (1 p )
n
(a.2)
5
1
Pn = 1 1 = 0,41 o 41% (a.3)
10
286
La probabilidad o el tiempo de retorno es calculado con
base en la serie histórica observada en el lugar. Para el cálculo
de la probabilidad las series deben ser representativas y
homogéneas en el tiempo. Cuando la serie es representativa,
los datos existentes permiten calcular correctamente la
probabilidad. Por ejemplo, el período de crecida entre 1970 y
1998 en el río Guaíba en Porto Alegre, Brasil, no es muy
representativo, porque ocurrieron solamente crecidas pequeñas
y fuera de este período ocurrieron varias mayores.
La serie es homogénea, cuando las alteraciones en la
cuenca hidrográfica no producen cambios significativos en el
comportamiento de la misma y, en consecuencia, en las
estadísticas de los caudales del río.
En el proyecto de áreas urbanas, como ocurre alteraciones
en la cuenca, el riesgo utilizado se refiere a la ocurrencia de una
determinada precipitación, que se admite que no es influenciada
por la urbanización. La combinación de la ocurrencia en la
precipitación, su distribución temporal, condiciones
antecedentes, etc., hacen con que el riesgo de precipitación no
sea el mismo del riesgo del caudal resultante.
El riesgo adoptado para un proyecto define la relación
entre las inversiones involucradas para reducir la frecuencia de
las inundaciones y los perjuicios aceptados. Al adoptar un
riesgo de 10% anualmente, o tiempo de retorno de 10 años, se
acepta que en media podrán ocurrir eventos que produjeron
perjuicios una vez a cada 10 años. El análisis adecuado
involucra un estudio de evaluación económica y social de los
impactos de las crecidas para la definición de los riesgos. Sin
embargo, esta práctica es inviable debido al costo del propio
estudio para pequeñas áreas. De esta manera, los riesgos
usualmente adoptados son presentados en la tabla a.1.
El proyectista debe intentar analizar adicionalmente lo
siguiente:
287
del proyecto y, plantear un sistema de alerta y
minimización de perjuicios.
288
conserva y preserva los ecosistemas a lo largo del tiempo.
289
• enfermedades debido a falta de higiene (water-washead
diseases): dependen de la educación de la población y de
la disponibilidad de agua segura. Estas enfermedades están
relacionadas con infecciones de oído, piel y ojos;
290
Medidas de control de inundaciones:
291
B
Anexo
Reglamentación de Porto
Alegre - Brasil
Legislación Federal y Provincial (o Departamental): Las
legislaciones que involucran el drenaje urbano y la inundación
ribereña están relacionadas con: recursos hídricos, uso del suelo y
licenciamiento ambiental.
293
la misma manera, la resolución CONAMA 1/86 artículo 2º, § VII
establece la necesidad de la licencia ambiental para las “obras
hidráulicas para drenaje”.
Recientemente, al referirse a los procedimientos para la
licencia ambiental en la ciudad de Porto Alegre, fue acordado que
ésta será de atribución del municipio, respetada la legislación
existente, de esferas superiores o correlatos.
En cuanto al límite con otras ciudades, la ciudad de Porto
Alegre posee una pequeña área en cuencas comunes con otros
municipios. Las principales son: (a) el tramo de aguas arriba en
la cuenca del Arroyo Diluvio, que queda dentro del municipio de
Viamão, donde las acciones que ahí ocurren en la parcela de la
referida ciudad puedan afectar la cuenca del Diluvio aguas abajo,
en Porto Alegre; (b) una área contribuyente de la margen
izquierda del Arroyo Feijó, que forma el límite de la ciudad de
Porto Alegre con las ciudades de Alvorada y Viamão. En este
caso, el ordenamiento y el control urbano de los dos lados del
arroyo deben ser coherentes con la política de control del drenaje.
El control institucional del drenaje que involucre más de
un municipio puede ser realizado: (a) a través de la legislación
municipal adecuada para cada municipio; (b) o a través de
legislación provincial que establezca los patrones a ser
mantenidos en los municipios, de tal manera que no transfieran
impactos; (c) el uso de los dos procedimientos anteriores.
Probablemente, la última hipótesis deberá ocurrir a largo plazo,
pero a corto plazo es más viable la primera opción, hasta que los
Comités de Cuenca y los Planes Provinciales desarrollen la
reglamentación sectorial. Por lo tanto, cuando sean desarrollados
los Planes de las Cuencas que involucran más de un municipio, se
debe buscar acordar acciones conjuntas con estos municipios para
obtenerse la planificación de toda la cuenca.
295
El PDDUA prevé, en la legislación, algunos instrumentos
importantes para el drenaje urbano de acuerdo con el
encuadramiento de las áreas:
296
geológicas e hidrológicas no aconsejan edificaciones (Anexo 8.1).
En el 3º párrafo, establece los condicionantes del espacio para el
drenaje urbano como la faja “no edificable”, y, en el párrafo 6º,
define que los nuevos emprendimiento deben mantener las
condiciones hidrológicas originales de la cuenca, a través de la
amortiguación del caudal pluvial.
El artículo 137 reserva áreas para los equipamientos
urbanos, entre los cuales se encuentra el drenaje urbano.
El artículo 160 de las disposiciones transitorias destaca la
necesidad de decreto del legislativo para la definición y
dimensionamiento de los reservorios de aguas pluviales.
Uno de los aspectos relacionados con la protección
ambiental y el drenaje urbano se refiere a la faja marginal de los
arroyos urbanos. El Código Forestal prevé la distancia de 30 m
desde la margen de los arroyos, definida por la sección del lecho
menor. En el desarrollo de la ciudad no se observa que este límite
ha sido atendido, lo que dificulta el control de la infraestructura
del drenaje urbano. En este sentido, se observa la necesidad de
medidas para actuar sobre la ciudad ya desarrollada con
parcelamiento aprobado y el cobro sobre los futuros
parcelamientos de la ciudad.
Reglamentación propuesta
Decreto propuesto
DECRETO N °
Reglamenta el control del drenaje urbano.
El Intendente Municipal de Porto Alegre, en el uso de sus
atribuciones legales y teniendo en cuenta los Art. 97 y Art. 135 §
6° de la Ley Complementar 434/99 y considerando que:
Declara que:
v = 4,25 AI
4
N.de T: Departamento de Desagües Pluviales de la Municipalidad de Porto
Alegre
299
a través de estudio hidrológico especifico, con
precipitación de proyecto con probabilidad de ocurrencia
del 10% en cualquier año (Tiempo de retorno =
10(diez) años).
§ 3º Podrá ser reducida la cantidad del área a ser
computada en el cálculo referido en el §1º caso sean
aplicadas las siguientes acciones:
• Aplicación de pavimentos permeables (bloques
perforados con relleno de arena o césped, asfalto
poroso, concreto poroso) para reducir en un 50% el
área que utiliza estos pavimentos;
• Desconexión de las canaletas del tejado para
superficies permeables con drenaje reducir en un 40%
el área del tejado drenado;
• Desconexión de las canaletas de tejado para superficies
permeables sin drenaje reducir en un 80% el área del
tejado drenado;
• Aplicación de trincheras de infiltración reducir en
un 80% las áreas drenadas para las trincheras.
§ 4° La aplicación de las estructuras listadas en el §
3 0 estará sujeta a la autorización del DEP, después de la
debida evaluación de las condiciones mínimas de
infiltración del suelo en el lugar de implantación del
emprendimiento, a ser declaradas y comprobadas por el
interesado.
§ 5 º Las reglas de dimensionamiento y construcción
para las estructuras listadas en el § 3º como también para
los reservorios deberán ser obtenidas en el Manual de
Drenaje Urbano del Plan Director de Drenaje Urbano
de Porto Alegre.
Art. 4° Después de la aprobación del proyecto de drenaje pluvial
de la edificación o del parcelamiento por parte del DEP, es
vedada cualquier impermeabilización adicional de superficie.
Párrafo Único: La impermeabilización podrá ser realizada
en el caso que haya retención del volumen adicional generado
de acuerdo con la ecuación del Art.3º §i 1º.
Art. 50 Los casos omitidos en el presente decreto deberán ser
objeto de análisis técnico por parte del DEP.
Art. 6° Este decreto entrará en vigor en la fecha de su
publicación, revocadas las disposiciones en contrario.
300
301
C
Anexo
Ct
Cu =
Ab
(
$/m 2 ) (c.1)
100 = A p + A i (c.2)
A i = i m + i l (c.3)
302
A i = im + (1 )il (c.4)
La ecuación 4 queda:
A i = 15 + 0,75 il (c.6)
0,15
Cup = Cui = 0,158 Cui (c.7)
0,95
Ab
Ct = (Cup A p + Cui A i ) (c.8)
100
A b Cui
Ct = (15,8 + 0,842 A i ) (c.9)
100
100 Ct
Cui = (c.10)
A b (15,8 + 0,842 A i )
A
Tx = (Cui A i + Cup A p ) (c.11)
100
A
Tx = [Cui A i + 0,158 Cui (100 A i )] (c.12)
100
A Cui
Tx = (15,8 + 0,842 A i ) (c.13)
100
A Cui
Tx = (28,43 + 0,632 il ) (c.13)
100
100x0,14
Cui = = $0,283/m 2 (c.14)
1x (15,8 + 0,842x40 )
304
300 0,283
Tx = (28,43 + 0,632 il ) = 24,137 + 0,545 (c.16)
100
Tabla C. 1.ejemplo del rateo de costo basado en el área impermeable del lote.
Área impermeable % Tasa anual para un terreno de 300
m2 $
5 26,86
10 29,59
20 35,04
30 40,49
40 45,94
50 51,39
60 56,84
70 62,29
80 67,74
Ctp 100
Cup i = (c.17)
Ab Ai
A i Cup i A
Txp = (c.18)
100
Cup i A
Txp = (15 + 0,75 il ) (c.19)
100
305
A Ctp (15 + 0,75 il )
Txp = (c.20)
Ab Ai
15 A Ctp
Txp = (c.21)
Ab Ai
306
307
D
Anexo
Elementos para la
reglamentación de
Porto Alegre
En la reglamentación para el desarrollo urbano es
necesario establecer criterios básicos de cálculo, de forma de
tornar más simple la definición de medidas legales y el
dimensionamiento del control debido a la impermeabilización.
Algunos de los elementos básicos de reglamentación son:
Caudal de predesarrollo
Q = 0,278 C I A (d.1)
308
Q
qn = = 2,78 C I (d.2)
A
Cp A p + Ci A i
C= (d.3)
At
Cp A p Ci A i
C= + = C p + (C i C p ) AI (d.4)
At At
309
C = 0,858 AI3 0,78 AI2 + 0,774 AI + 0,04 (d.6)
25400
S= 254 (d.9)
CN
P = I tc (d.10)
312
Tabla D. 3. Valores de caudal especifico de predesarrollo
Tiempo de retorno Años Caudal l/s.ha
2 9,62
5 11,9
10 13,9
25 16,9
50 19,5
100 22,5
Volumen de control
V = (Q u Q n ) t k (d.12)
V
= (0,278 C I qn ) 60 t (d.13)
A
313
0,278 C a
v = q n
60 t
(d.16)
(t + b )d
1
q (t + 0,278 C a ) (d+1) (d.17)
t = n b
0,278 C a(1 d)
314
En este caso, el volumen necesario para recuperar el
caudal preexistente para un área de 1000 m2 con 50 % del área
impermeable es:
315