CONSIDERACIONES SOBRE LA FIABILIDAD DE LOS TEST PROYECTIVOS EN

LA PRÁCTICA CLÍNICA
“El uso de métodos y técnicas cualitativas ha estado
acompañado de críticas que, resumiendo mucho, se han
centrado en su presunta falta de objetividad, la imposibilidad de
reproducción de sus resultados, la falta de validez, etc., en
definitiva, que se trata de un tipo de actividad más próxima a la
literatura que a la ciencia”
IBAÑEZ, T e ÍÑIGUEZ, L. 1996

Introducción
Como parte de una evaluación psicológica nosotros debemos contar con instrumentos
que nos permitan acercarnos más al entendimiento de la problemática que tiene el
paciente. Estos instrumentales pueden medir ya sea la parte cualitativa de la persona
(proyectivos) o la cuantitativa (psicométricos), dependiendo la necesidad que tenga el
evaluado.

Las técnicas proyectivas son “Instrumentos considerados como especialmente

sensibles para revelar aspectos inconscientes de la conducta, ya que permiten
provocar una amplia variedad de respuestas subjetivas, son altamente
multidimensionales y evocan respuestas y datos del sujeto, inusualmente ricos con un
mínimo conocimiento del objetivo del test, por parte de éste” (citado por Martínez, M.
2008). A diferencia de los test psicométricos, estos test cualitativos buscan
comprender en lo posible los procesos cognitivos-perceptivos del paciente y la
estructura de su personalidad.

Sin embargo, los test proyectivos (cualitativos) aún son categorizados como empíricos
por lo que ha motivado a que los grandes investigadores lleguen a discusiones en
cuanto a su validez y confiabilidad, ya que este tipo de herramientas psicológicas no
sustenta criterios metodológicos acorde a los conceptos de la ciencia clásica.

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Desarrollo

A partir de varias investigaciones se ha llegado a la conclusión de que las técnicas

proyectivas han sido consideradas instrumentos que nos van a ayudar a conocer la
personalidad de un paciente, por lo que han sido aplicados en algunos campos como
son: el clínico, laboral, forense y educacional (Sneiderman, 2011, p. 94).

Es por esto que en la actualidad se considera que toda evaluación psicológica en el

área clínica debe ser contrastada desde datos tipo cuantitativo y cualitativo, pues de
esta forma estamos aplicando la mención de que una persona no solo es
biopsicosocial sino también posee un súper yo - yo y ello; por lo que debemos
abarcar todas sus áreas de forma amplia para dar con un diagnostico confiable, que
a su vez nos servirá para ejecutar un plan de intervención funcional.

Los test proyectivos tienen varias aplicaciones: a nivel diagnóstico nos permite
obtener información que a veces no se puede extraer a través de la entrevista, en un
diagnóstico diferencial nos admite delimitar el trastorno y a nivel psicoterapéutico nos
permite planificar un tratamiento adecuado para su mejora.

“Es válido todo método que detecte lo que se pretende investigar. Pero si lo que
perseguimos es describir, comprender y explicar la dinámica y estructura de la
personalidad del entrevistado de acuerdo con la Psicología Psicoanalítica, los hechos
no son de observación simple, sino que están determinados por la teoría, por lo
tanto, para que el método sea válido deberá ser consistente tanto con los hechos
observados como con la teoría en la que pretende apoyarse”. (Maldavsky, 2004).

Aunque algunos investigadores mencionan que esta técnica no es precisa como se

daría en el caso de los instrumentos psicométricos, Didier Anzieu en su libro Los
métodos proyectivos (1961) nos indica que la confiabilidad y la validez de estas
herramientas se denota en la validación de hipótesis y su conformación - refutación

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está relacionada con el método de interpretación que se utiliza, en este caso sería el
psicoanálisis freudiano.

Es muy útil la aplicación de test proyectivos en casos de inhibición del paciente para
hablar de sí mismo o de su historia, pues permite que se establezca el primer
contacto y que favorezca a la relación paciente-terapeuta. Otra de las utilidades que
tiene es en cuanto al hallazgo de material en el diálogo del paciente, pues hay cosas
que quizá el evaluado olvidó o que se le hace duro afrontarlo; por lo que cada uno de
los test proyectivos facilita esta información de acuerdo a su estructura.

Conclusión

A partir de la información y la experiencia que se va teniendo en el ámbito profesional

se puede decir que los test proyectivos quizá no tengan una base psicométrica o un
sustento científico; pero se debe tener muy en cuenta que los test tienen una
característica que es muy importante en la vida de una persona, como es la
personalidad y su percepción; a través de la cual se puede descubrir la estructura y
funcionamiento de un paciente, además de descubrir emociones y conflictos que se
llevan dentro, que a veces no quieren ser expuestos por varios motivos que llega a
tener la persona; llevándonos a complicar el acercamiento a la verdadera causa que
le trae a un paciente a consulta. Mediante la interpretación por parte del psicoanálisis
de las respuestas se puede sacar a relucir los conflictos más inconscientes que tenga
el ser humano, lo cual se debe empatar con respuestas psicometría que lleva una parte
más estandarizada de las otras áreas de la persona; permitiendo así abordar de forma
completa al individuo en consulta y permitiendo se le atribuya un diagnostico que esté
más cerca de la realidad y con más posibilidades de realizar una planeación
psicológica exitosa.

Bibliografía

Ibáñez, T. e Íñiguez, L. (1996). Aspectos metodológicos de la psicología social

aplicada. Madrid: McGraw-Hill
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Martinez, M. 2008. Estudio de la personalidad: Test proyectivos. Barcelona: UAB

Sneiderman, S. 2011. Consideraciones acerca de la confiabilidad y validez en las

técnicas proyectivas. Argentina: REDALYC

Maldavsky, D. (2004). La investigación psicoanalítica del lenguaje. Buenos Aires:

Lugar Editorial.