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Resumen
El emprendimiento se caracteriza por la transformación de innovación, conocimientos,
oportunidades o ideas para la creación de nuevas empresas con el fin de obtener ganan-
cias y estimular cambios sociales y económicos. Según la literatura, para que surjan estos
cambios es necesario tener altos niveles de actividad emprendedora regional. Esta investi-
gación propone un modelo integrado de factores determinantes que estimulen la actividad
emprendedora y el desarrollo económico. Este modelo se compone de los determinantes
institucionales, los determinantes económicos y los determinantes sociales. Se recopilaron
datos mediante 189 cuestionarios a empresarios futuros y en desarrollo. Se hallaron corre-
laciones significativas entre los determinantes del modelo y la actividad emprendedora.
Los resultados de esta investigación proveen herramientas útiles para diseñar políticas
públicas dirigidas a estimular la actividad emprendedora. También provee a los investiga-
dores una base para continuar estudios que determinen la efectividad de la integración de
elementos que estimulen la actividad emprendedora.
1. Introducción
ca. A su vez Spencer y Gomez (2003) discuten que de acuerdo al nivel de actividad
emprendedora que se quiera fomentar, se deben desarrollar diferentes marcos teóri-
cos independientes de políticas económicas (Spencer & Gomez, 2003). Sin embargo,
los desarrolladores de políticas carecen del conocimiento de los factores que se aso-
cian con altas actividades emprendedoras y de acciones que los gobiernos pueden lle-
var a cabo para promover el emprendimiento en sus economías. Por lo tanto, se ha
determinado que existe la necesidad de investigar y entender las políticas y prácticas
que cultivan el emprendimiento regional. Así por ejemplo, Busenitz y otros (2000) )
sugieren dirigir la investigación a identificar la composición de factores que ayuden
a los gobiernos a desarrollar, implementar y promover políticas que fomenten acti-
vidades emprendedoras a largo plazo.
La investigación existente y la literatura revisada presentan modelos fragmenta-
dos para relacionar la actividad emprendedora con factores demográficos, sociales y
económicos (Acs & Armington, 2002; Audretsch & Keilbach, 2005; Busenitz et al.,
2000; Kostova, 1997; Spencer & Gomez, 2003; Van Stel et al., 2005). Estos mode-
los de investigación identifican y utilizan una diversidad de factores determinantes
para perfilar la actividad emprendedora regional. Sin embargo, según la literatura
revisada, no existe una integración de estos factores para construir un modelo con-
ceptual de dichos determinantes.
Esta investigación presentará un modelo de determinantes en el que se incorpo-
ran factores sociales, institucionales y económicos con el fin de explorar su relación
con el nivel de emprendimiento a nivel regional. A su vez, esta investigación será de
utilidad para identificar las herramientas de política pública que estimulan la acele-
ración de niveles de actividad emprendedora en una región. Mediante este modelo,
las personas que desarrollan las políticas emprendedoras pueden dirigir los recursos
a las áreas que realmente sean receptivas a estas estrategias.
2. Revisión de Literatura
Pero por otro lado, una alta intervención gubernamental de financiación pública
reduce los incentivos para perseguir actividades emprendedoras (Bjornskov & Foss,
2006). El derroche de los recursos públicos para sostener permanentemente los pues-
tos de trabajo que no añaden valor a la producción agota la capacidad de la econo-
mía para competir en mercados que ya no conocen fronteras (Gutiérrez, 1996).
Los determinantes institucionales se construirán con las leyes y reglas que pro-
mueven el emprendimiento. A este modelo se le incorpora el factor gubernamental y
sus políticas (Audretsch & Keilbach, 2004a; Bjornskov & Foss, 2006; Kostova,
1997; Kreft & Sobel, 2005; Licht & Siegel, 2005; Yu, 1998; Zahra & Hansen,
2000). El factor gubernamental está en función del grado de intervención y el apoyo
del gobierno a la actividad emprendedora. El factor político está en función del
tamaño del gobierno, el gasto público, impuestos, regulaciones y el marco legal.
Amoros et al. (2012) sugieren que la política pública para el desarrollo de empre-
sas debe dirigirse a apoyar sectores dinámicos de negocio en vez de sectores indus-
triales en una región. Liao et al. (2001) desarrollaron un modelo para determinar el
crecimiento de una conducta emprendedora. Su modelo de comportamiento se basa
en factores de macro ambiente y factores de microambiente. Los factores macro se
refieren a la política pública, a la infraestructura del mercado, a los mercados finan-
cieros y a los desarrollos tecnológicos. Los factores del micro ambiente comprenden
factores internos como motivaciones y aspiraciones de los emprendedores, los cuales
son críticos para entender el crecimiento de las empresas.
Begley et al. (2005) dieron forma a la relación entre las dimensiones político-eco-
nómicas del ambiente y el emprendimiento. Las dimensiones político-económicas se
constituían por los recursos económicos, los políticos, los de mercados, los de infra-
estructura y los sociales que determinaban el interés de una actividad emprendedora.
Algunos economistas (Audretsch & Keilbach, 2004b) han identificado el capital
físico, el capital humano y el capital del conocimiento como factores estimulantes al
desarrollo económico; también introdujeron un cuarto factor, el concepto del capital
emprendedor. El capital emprendedor comprende todos aquellos factores y fuerzas
de la sociedad que conducen a la creación de empresas. Es la dotación de una región
de factores propicios a la creación de empresas. Su modelo encontró que existe una
relación positiva al crecimiento económico medida por el ingreso per capita regional.
Este mismo concepto fue aplicado para investigar su relación con la productividad
laboral regional. Los resultado sugieren que el capital emprendedor tiene un gran
impacto positivo en la productividad laboral regional (Audretsch & Keilbach, 2005).
Spencer y Gomez (2003) ven el autoempleo como la forma más simple de
emprendimiento. Acs (1992) afirmó que las tasas de crecimiento de auto empleo se
pueden asociar a aumentos en la actividad emprendedora, a un aumento en la diver-
sidad y a altos niveles de capital humano. El gobierno y sus políticas pueden afectar
166 José E. Berríos Lugo y Maritza I. Espina
Capital Financiero
Investigación y
Desarrollo Educación
Políticas
Gubernamentales
Infraestructura Comercial
y Profesional Cultura
Programas
Gubernamentales
Infraestructura
Actividad Emprendedora
3. Metodología
4. Análisis de Resultados
Este estudio tuvo como objetivo determinar la relación entre los determinantes s
institucionales, económicos y sociales con la actividad emprendedora. Se realizaron
una serie de pruebas estadísticas de correlación y regresión múltiple para determinar
el tipo de relación lineal entre estos determinantes y la actividad emprendedora. En
las tablas 1 y 2 se presentan los resultados. Todos estos coeficientes indican una
correlación positiva moderada con respecto a la actividad emprendedora. El coefi-
ciente de mayor correlación es el determinante social. Este coeficiente es de r = 0,597.
Seguido por el determinante económico y el determinante institucional. La interac-
ción del modelo de determinantes con la actividad emprendedora refleja un coefi-
ciente R = 0,676; esto nos indica una correlación positiva entre los valores observa-
dos y la actividad emprendedora. El coeficiente de correlación para este modelo de
determinantes es de .456. Este modelo explica un 45.6 por ciento de la variación en
la actividad emprendedora. Si se introducen nuevos determinantes al modelo, esto
afectaría la actividad emprendedora en un 0,448. La interacción de los determinan-
tes del modelo presenta ser significativo con respecto a la actividad emprendedora.
R R2 R2 ajustado
mento de investigación y desarrollo son consistentes con los resultados obtenidos por
otros investigadores. Estos resultados giran en torno a las oportunidades que genera
la investigación y desarrollo (Audretsch & Keilbach, 1990).
La infraestructura comercial y profesional fue otro elemento de fuerte relación
con la actividad emprendedora. No obstante, es un factor importante estadística-
mente; los participantes indicaron la alta calidad y accesibilidad de los servicios pro-
fesionales pero señalaron su alto costo. Estos hallazgos son consistentes con los
resultados de la importancia de la infraestructura profesional y comercial en la lite-
ratura (Fairlie, 2006). La infraestructura física es el tercer elemento de fuerte rela-
ción con la actividad emprendedora.
Los integrantes del determinante social presentaron las relaciones más significa-
tivas del modelo. Este determinante está compuesto por los factores de educación y
cultura. En la interacción de los factores con respecto a la actividad emprendedora,
la educación fue el de menor relación. La educación fue medida en función de la
enseñanza de necesidad de logros, auto suficiencia y la iniciativa personal. Algunos
estudios (Kristiansen & Indarti, 2004) han encontrado que estos elementos de la
educación son significativos con respecto a la actividad emprendedora. Este aspecto
fue uno de los más identificados en desacuerdo por los participantes. Algunos inves-
tigadores (Lena & Wong, 2003) recomiendan que los niveles académicos deben
invertir sus esfuerzos en cambiar las actitudes y la manera de pensar de sus grupos
objetivos y que también deben desarrollar incentivos para que la gente que esté inte-
resada genuinamente dedique su tiempo a la educación en el emprendimiento.
La cultura es el elemento de mayor peso del modelo determinante social. La cul-
tura es vista por algunos investigadores (Amit et al., 1993) como el factor determi-
nante en la actividad emprendedora y sugieren que debe existir una armonía entre
los constructos ideológicos y el comportamiento económico. Existe un consenso en
la literatura (Krueger & Brazeal, 1994) sobre el impacto de la publicidad de los éxi-
tos empresariales y la percepción de los empresarios en la cultura nacional. Esta
impacta positivamente en la actividad emprendedora, ya que se trata de una cultura
(Krueger & Brazeal, 1994) que apoya la actividad emprendedora, combina estruc-
turas, sistemas de recompensas y mecanismos de apoyo que colectivamente refuer-
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5. Conclusiones
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