Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
PROYECTO
Informe
Página
I. Presentación 3
X. Anexos 25-27
§ Bibliografía
§ Capitulo II, Ley Electoral
2
PRESENTACIÓN
Este trabajo propone una estrategia para la participación política de las mujeres
hondureñas en el contexto de las reformas a la ley electoral, en el marco del proyecto:
Gobernabilidad Democrática e igualdad de género en América Latina patrocinado
por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe - CEPAL, Unidad Mujer
y Desarrollo.
Uno de los propósitos del proyecto es abonar al camino recorrido por el Instituto
Nacional de la Mujer en su esfuerzo por afianzar su institucionalidad en el Estado como
ente rector de las políticas destinadas a mejorar la situación y posición de las mujeres
hondureñas, así como dar cumplimiento a la política Nacional de la Mujer, plan
consensuado con el Movimiento amplio de Mujeres y que fue elevado a rango de política
de estado en Noviembre del 2002. Allí se establece el carácter prioritario de La
participación Social y Política de las Mujeres.
Para realizar este trabajo se consideró tomar como punto de partida los resultados de las
investigaciones que ha patrocinado el Instituto Nacional de la Mujer en el tema de
Participación Social y Política de las Mujeres, deteniéndonos en los factores culturales que
posibilitan la participación de las mujeres en los puestos de elección popula. En tal sentido
para fines de esta trabajo se retoman tanto los datos cuantitativos sobre los procesos
electorales que muestran el porcentaje de participación de las mujeres, como los datos
cualitativos sobre la cultura política que permea la participación política de las mujeres
hondureñas, así mismo las diferentes propuestas desarrolladas por diferentes actores.
Lo anterior nos permitirá contar con un diagnóstico sobre la participación política de las
mujeres, el que fue utilizado para el desarrollo de encuentros donde participaran las
diferentes iniciativas de mujeres tanto del movimiento de mujeres, movimiento fe minista
como las integrantes de los cinco partidos políticos, las congresistas para discutir
estrategias viables que posibiliten la participación de las mujeres en las propuestas de
reformas a la ley electoral.
3
LA PARTICIPACIÓN SOCIAL Y POLITICA DE LAS MUJERES
HONDUREÑAS
Por otro lado y en alusión a la relación que las mujeres establecieron tempranamente entre
el espacio doméstico-familiar y la política pública, tal como señala Rina Villars “En la
campaña presidencial de 1902 un grupo de señoritas organizó el club “Las Palmeras” en
el pueblo de Guarita, departamento de Lempira, para apoyar la candidatura de Manuel
Bonilla. Doña Carlota de Membreño, una mujer bonillista, expresó que la simpatía de
las mujeres estaba con aquel candidato que mejor supiera garantizar la paz de sus
hogares”.2
____________________
1.COFEMUN-INAM Investigación “Participación Política de las Mujeres Hondureñas, citando a Rina
Villars, Pág. 28.
2. idem, pág.28
4
En las primeras décadas del siglo XX las mujeres participaron en luchas políticas en
defensa de la soberanía nacional y el proyecto unionista centroamericano; En tal sentido
como afirma Rina Villars “El primero de estos actos tuvo su manifestación más notable
en 1913, cuando en el senado de los Estados Unidos se discutía la posibilidad de
convertir a Nicaragua en un protectorado estadounidense. Entonces hubo un rechazo
casi generalizado del pueblo hondureño ante lo que se consideró una afrenta a la
soberanía y dignidad centroamericanas”.3
Las mujeres obreras no solo formaron la Federación Obrera Hondureña (FOH) sino que
desde esta plataforma reivindicativa se organizaron en comité para la defensa del ideal
unionista. “En Tegucigalpa se organizó el Comité Central Femenino Unionista “Juan
Rafael Mora” el cual fue presidido por Visitación Padilla...en el interior del país se
formaron sub-comités y clubes femeninos unionistas...” en los cuales se destacaron
mujeres como “Carlota Boquín..., Olimpia Varela..., Guillermina Chávez...y Cleotilde
Galindo.”5
Fueron las mujeres liberales las que iniciaron todo una ola de protestas contra el régimen
de Carias. Se destacan en las protestas del 29 de Mayo de 1944 mujeres como Visitación
Padilla, Enma de Bonilla, Argentina Díaz Lozano, Carlota de Valladares, quienes al frente
de mujeres de diversas clases sociales, se enfrentaron públicamente con el régimen.
5
Las mujeres a través de la historia han tenido una intensa participación en la vida política,
desde donde han logrado articular demandas comunes a toda la sociedad, tales como la
soberanía y la democracia, con las demandas por el reconocimiento de los derechos
ciudadanos de las mujeres.
Lo anterior nos llama a la reflexión en cuanto a la actuación que deben tener las mujeres en
los diferentes poderes del Estado, el actuar sin haber generado consensos, sin conocimiento
sobre la jurisprudencia, la falta de análisis político nos conduce al desarrollo de acciones
que provocan adversidad.
Los datos del proceso electoral de 2002 permiten afirmar que la participación de las
mujeres en instancias de toma de decisiones en el ámbito nacional y local continúa por
debajo de la participación masculina. En todos los casos los hombres ocupan posiciones
evidentemente más ventajosas que las mujeres (primeros lugares en las listas de candidatos
y primeros cargos en la mayoría de las instituciones del estado sobre todo en los niveles
6
mas altos de la pirámide. Las elecciones nos muestran la diferencia significativa entre
hombres y mujeres ocupando puestos de toma de decisión en los tres poderes del Estado,
siendo paradójico que existiendo la Ley de Igualdad de Oportunidades la participación de
las mujeres baje en estos puestos. El siguiente cuadro nos muestra los datos que
demuestran lo expuesto:
CUADRO No 1
Representación de Hombres y Mujeres en los más altos
cargos de Toma de Decisión en los Poderes del Estado
Período 2002-2007
7
IV. PARTICIPACIÓN POLÍTICA DE LAS MUJERES EN EL ACTUAL
CONTEXTO.
Como constatan los textos oficiales que documentan “la historia” del país, pocas veces se
recupera la participación política de las mujeres hondureñas del pasado y aun en el
presente. En general encontramos una sobre-representación de las figuras masculinas en
calidad de héroes, líderes o ilustres hijos de la patria, y una subrepresentación de las
mujeres, las que en el mejor de los casos son presentadas como honrosas excepciones del
género femenino en el espacio público.
La lucha de las mujeres por conquistar el derecho al voto, se ubica como uno de los grandes
hitos en la historia de participación de las mujeres en el espacio público, en su esfuerzo por
ser incluidas en el concepto de democracia. En este contexto podemos destacar la
participación de la Federación de Asociaciones femeninas de Honduras (FAFH),
acompañada de mujeres profesionales, como la Abogada: Alba Alonso de Quezada, Lucy
Gamero de Medina, Clementina Suárez y muchas otras que no han sido registradas.
Se puede ver cómo los planteamientos del pasado para obstaculizar la participación
política de las mujeres en igualdad de oportunidades, son similares a los del presente, para
ello citamos los argumentos del siglo pasado y los del presente:
8
hombres eran los únicos aptos para participar en el espacio público, que por cierto aparece
distanciado de la familia, de la moral y de la religión.” 6
Las reacciones no se hicieron esperar, antes de discutirse los artículos 133 y 134 que
proponen la igualdad de oportunidades, en la Ley Electoral, el Diputado Oswaldo Ramos
Soto Dijo a la prensa nacional lo siguiente:
“ Creo que hay que apoyar a las mujeres porque sin ellas qué pasaría en el Mundo.
No podríamos reproducirnos”
La cuestión política es compleja porque hay que andar en el campo, cuando un
hombre anda en las montañas y tiene que hacer sus necesidades fisiológicas se hace a
un lado y se mete, pero a las mujeres habría que inventarles un aparato especial
porque hay problemas cuando andan en los carros”. (Diaro: El Heraldo del 25 de
Marzo del 2004)
En este momento de la historia a más de un siglo, los argumentos siguen teniendo las
mismas bases de sustentación, ahora las mujeres no pueden asumir la vida política por
funciones fisiológicas y porque la reproducción de la especie humana es exclusividad de las
mujeres, en cambio a los los hombres si les es permitido descubrir públicamente su cuerpo,
para satisfacer sus necesidades, y continua éste sin asumir la reproducción como su
6
COFEMUN-INAM Investigación “Participación Política de las Mujeres Hondureñas, citando a Rina
Villars, Pág. 24 y 25.
9
responsabilidad distanciándose nuevamente de la moral y la familia, asignándole a las
mujeres los asuntos de la reproducción como responsabilidad exclusiva así como el
resguardo de la moral.
A pesar de las barreras y obstáculos impuestas por la cultura hegemónica que intenta
confinar a las mujeres en el espacio doméstico, ellas han defendido su derecho de
participación, delimitando estrategias de acercamiento con los hombres para que éstos
asuman las propuestas de las mujeres Eso es de gran importancia en el proceso de
transformación de estereotipos y prejuicios que sirven para perpetuar la discriminación
contra las mujeres.
El paso de las mujeres por posiciones de liderazgo en el espacio público en muchos casos
está directa o indirectamente vinculado a iniciativas que promueven una nueva cultura de
relación entre mujeres y hombres, un nuevo ordenamiento jurídico y un nuevo papel del
estado en la promoción de la equidad de género.
Muchas mujeres que ocupan posiciones de liderazgo en los partidos políticos y/o cargos de
dirección en el estado, han demostrado su compromiso con la promulgación de leyes,
elaboración e impulso de políticas públicas favorables a los derechos de las mujeres y por
ende a la equidad de género; así como a la promoción de mecanismos institucionales que
garanticen la implementación de las mismas por parte del estado hondureño.
10
mantener vigente la Comision de la Mujer, incorporando a todas las congresistas de los
diferentes partidos politicos, la Diputada: Doris Gutierrez, es una de las mujeres que ha
levantado la voz en el seno del Congreso para defender las propuestas de ley encaminadas a
garantizar los derechos humanos de las mujeres, en este recorrido se han destacado tambien
las diputadas: Luz Ernestina Mejía, Gloria Oqueli, estas últimas se destacaron en la defensa
de la ley de Igualdad de Oportunidades, obligando a los Diputados a considerar la
participación de las mujeres diputadas en la discusión y aprobación de esta Ley, en este
periodo, estas mujeres se tomaron las instalaciones del Congreso Nacional cuando los
diputados se encontraban en su interior, coordinando acciones con el Movimiento de
Mujeres, obligando así a las diferentes bancadas de los partidos políticos a generar un
dialogo con el Movimiento de Mujeres.
Acciones como las anteriormente mencionadas muestran claramente la capacidad que las
mujeres han desarrollado conjuntamente para hacer valer sus derechos. Sin embargo es
necesario rescatar que estos procesos han sido acompañados por hombres sensibles y
comprometidos con la lucha de las mujeres, los cuales han sido canales para viabilizar él
dialogo con las dirigencias de los partidos políticos y de los poderes del Estado.
Durante las últimas tres décadas encontramos un movimiento de mujeres amplio, plural,
heterogéneo y con presencia en casi todo el territorio nacional, aportando desde las
diferentes realidades al proceso democrático nacional
Se pueden destacar algunos puntos fundame ntales que han significado el cimiento de los
aportes del movimiento de mujeres/ feminista Por lo tanto se debe de considerar el aporte
que la academia ha dado a centenares de mujeres en su formación y desarrollo, las que en
la actualidad son lideres del movimiento de mujeres / feminista, el recorrido que a
continuación se detalla habla por sí solo:
1
este proceso iniciado por la Señora Maria Marta Díaz, directora del INAM, el movimiento de Mujeres aporta
propuestas, a través de la instancia de la Convergencia de Mujeres-Honduras, revisando , analizando el documento
borrador, realizando una propuesta completa la que fue retomada en su contenido para el documento final. El proceso de
la política Nacional de la Mujer fue retomado por la Ministra del INAM, Marcela del Mar Suazo , logrando
conjuntamente con el Movimiento de Mujeres que se elevara a Política de Estado, este hecho es de gran relevancia, ya que
por primera vez en la vida de la Institución se da continuidad al trabajo desarrollado en una gestión anterior, ello muestra
que esta practica representa avances en la instalación de políticas publicas. La voluntad política y el compromiso de esta
funcionaria de Gobierno fueron dos aspectos cruciales para contar con esta política de estado.
11
El inicio de los estudios de género a finales de la década de los ochentas, en la Universidad
Nacional Autónoma de Honduras, promovidos estos por El Consejo Superior de
Universidades Centroamericanas 2 Otro de los elementos fundamentales es el surgimiento
de organizaciones de mujeres de diversos sectores ( campesinas, estudiantes, profesionales,
pobladoras, ...)3 .
Realización de encuentros nacionales, regionales e internacionales convocados por el
movimiento feminista, así como su activa participación en conferencias internacionales
convocados por el Sistema de Naciones Unidas, son parte de los hitos que marcan el
proceso de desarrollo de las agendas de las mujeres.
El esfuerzo realizado por las diversas expresiones del movimiento de mujeres para lograr
por parte de las instituciones del estado la formulación e implementación de políticas
públicas que consideren las necesidades específicas de las mujeres en un marco de equidad
de género, se refleja en los siguientes esfuerzos:
2
Allí se destacan Ligia Delgadillo, Helga Jimenes, Ligia Martin, responsables del programa de género en este Consejo
con sede en San José Coista Rica, Elsa Lily Caballero Zeitun, Blanca Guifarro, Ana María Soza, Cecilia Sánchez, Blanca
Dole, quienes desarrollaron investigaciones en la academia y promovieron los encuentros nacionales y se involucraron en
el establecimiento de las relaciones con el movimiento de mujeres de la región centroamericana y Latinoamericana.
3
Se destacan Concepción Betanco, Gladys Lanza, Merly Eguigure, Zoyla Madrid, Miriam Miranda, Iris
Aquino, Alicia Cayes, Dinora Ruiz, Sara Elisa Rosales, Narda Meléndez, Maribel Lozano
12
el Profesor: Rafael Pineda Ponce, el que estaba postulándose a la Presidencia
de la República.
Este fue un proceso que se dio en dos momentos: Primero para su elaboración, en la cual
participaron todas las expresiones del movimiento de Mujeres/feminista del ámbito
nacional, en este momento podemos destacar la participación de la Convergencia de
Mujeres-Honduras que desarrollo una propuesta de política la cual fue retomada en sus
partes medulares por el Instituto Nacional de la Mujer.
El segundo momento se da con el cambio del Gobierno donde asume la presidencia el Sr.
Ricardo Maduro, asignando la responsabilidad del Instituto Nacional de la Mujer a la Ms.
Marcela del Mar Suazo, persona que presento apertura y voluntad política para continuar
construyendo políticas que beneficien a las mujeres hondureñas, En este marco La
convergencia de Mujeres-Honduras, continuo su proceso de incidencia integrando el
Consejo Directivo del Instituto Nacional de la Mujer, desde donde se logra un dialogo
directo con el Presidente de la República para lograr elevar la Política Nacional de la Mujer
a Política de Estado. Este momento fue acompañado por la Ministra Marcela del Mar Suazo
y la Primera Dama: Aguas Ocaña de Maduro.
13
Del proceso anterior se puede rescatar la importancia del consenso entre las diferentes
expresiones del movimiento de mujeres / feminista, así como la voluntad política de las
funcionarias y funcionarios del Estado hondureño en la construcción de políticas públicas.
Por primera vez en la historia de participación política de las mujeres, estas se atreven a
proponer una nueva Ley Electoral que garantice a la población participar en igualdad de
oportunidades. Esta propuesta fue elaborada a través de consultas en el ámbito nacional
coordinando esta iniciativa El Movimiento de Mujeres “ Visitación Padilla”.
Se logró que muchas organizaciones de la sociedad civil retomaran la propuesta,
elaborando una propuesta en el seno del Movimiento Cívico por la Democracia, en donde
las mujeres plantean un sistema proporcional personalizado, incorporación de la fotografía
en las planillas y en forma alterna, plasmando el 50% de participación de las mujeres.
En el esfuerzo de cambiar la cultura política del país, las organizaciones que integran el
movimiento de mujeres /feminista, han desarrollado múltiples esfuerzos de sensibilización
y educación con mujeres y hombres, para desmontar los estereotipos y prejuicios sobre los
que se sostienen relaciones de desigualdad. Ello probablemente constituye uno de los
aportes transcendentes de las mujeres a la construcción de la democracia.
14
En tal sentido el movimiento de mujeres/ feminista, ha desarrollado acciones tanto
con la sociedad civil como con instituciones gubernamentales para generar un pensamiento
de igualdad y equidad entre los géneros.
Desde los tiempos de la colonia hasta nuestros días la cultura política predominante en
nuestra sociedad se fundamenta en una arbitraria separación entre el espacio público y el
privado, por medio del cual las mujeres son asumidas como “naturalmente facultadas” para
hacerse cargo del trabajo doméstico y de la satisfacción de las necesidades de la familia; en
tanto los hombres aparecen como “socialmente facultados y capacitados” para
representarlos intereses de toda la sociedad en el espacio público.
Esta exclusión de las mujeres del ejercicio de sus derechos políticos es la que las ubica en
el marco de sistemas democráticos como “ciudadanas de segunda categoría”, que si bien
por ley son reconocidas como ciudadanas y en tanto tales están obligadas a cumplir un
conjunto de obligaciones, tal reconocimiento no tiene su correlato en el reconocimiento
pleno y efectivo de sus derechos.
15
Explicando la división del espacio privado y el público la Doctora Celia Amorós afirma que
“lo privado y lo público constituyen una invariante estructural que articula las sociedades
jerarquizando los espacios: el espacio que se adjudica al hombre y el que se adjudica a la
mujer. El espacio público, al ser el espacio del reconocimiento, es el de los grados de
competencia, por lo tanto del más y del menos. Por el contrario, las actividades que se
desarrollan en el espacio privado, las actividades femeninas, son las menos valoradas
socialmente.”7
Es producto de esa división conflictiva y cada vez más incongruente entre el espacio
público (el de los hombres) y el espacio privado (el de las mujeres), que cuando algunas
mujeres transgreden incursionando en el espacio público, resultan “excesivamente
visibles” y frecuentemente “criticables” para el conjunto de la sociedad.
A pesar de los cambios que se han operado en la participación de las mujeres en el ámbito
público, estas continúan siendo consideradas como “atípicas”, es decir, como mujeres que
presentan una forma de vida que, en la medida que se separa del modelo ideal de mujer y
se acerca a la vida típica de los hombres, se vuelve anormal y sospechosa en algún
sentido.
A esta percepción de anormalidad y sospecha se debe en parte al hecho de que las mujeres,
que a lo largo de la historia han tenido un papel destacado en el ámbito público y
particularmente en el ejercicio del poder público, permanezcan sin dejar rastro alguno en la
historia oficial, la cual continua empeñada en resguardar y heredar a las nuevas
generaciones figuras masculinas emblemáticas (en plural), llamadas a convertirse en
modelos a imitar por el conjunto del colectivo masculino.
Sin embargo como lo muestran las evidencias, a pesar de los múltiples obstáculos que
enfrentan las mujeres en el ámbito individual y colectivo para participar en la política, un
cambio importante de las últimas décadas es precisamente el incremento significativo de las
7
Amorós Puente, Celia: Mujer, Feminismo: Igualdad y Diferencia, Pág. 25
16
mujeres que muestran interés por participar no solo en el espacio público en general, sino
en las instancias de toma de decisiones desde posiciones de liderazgo.
Con relación a como se autoriza a las mujeres a ejercer el poder Amelia Valcárcel afirma
que “el único lugar donde está siendo permitido que el sexo femenino tenga acceso mas o
menos parejo al masculino al poder es la detentación del poder legítimo, es decir, el
político. 9
Aclara sin embargo, que “el poder explícito y a la vez legítimo por excelencia es el poder
político”, 10 y que en el caso de algunas mujeres tienen cierto grado de experiencia en el
poder inexplícito que también suele llamarse “influencia”.
En el mismo sentido afirma que “las mujeres tienen para detentar el poder explícito y
legítimo una normativa inexplícita enormemente fuerte”11 . En tal sentido señala tres rasgos
con características normativas que establecen como una mujer debe detentar este poder, a
saber: Detentan este poder sin la “completa investidura”; detentan el poder con los tres
votos clásicos: pobreza, castidad y obediencia; a las mujeres les es permitido detentar este
poder siempre que a él lleven las virtudes de fidelidad y abnegación.
Agrega a las características antes señaladas, la afirmación de que “el poder femenino es
genéricamente no significativo”.“Dado el deber de sumisión, distinto del deber de
8
Aguilar, dole, Herrera, Montenegro, Camacho, Flores: Movimiento de Mujeres en Centroamérica,
Pág. 31
9
Valcárcel, Amelia: La Política de las Mujeres, pág. 113
10
Ídem, Pág.114
11
Ídem. Pág. 115
17
obediencia, dada la no completa investidura, dadas las condiciones especiales de la
detentación del poder, este poder es necesariamente inestable: lo detenta alguien, pero ese
poder no se hace extensivo como detentación al colectivo completo al que ese alguien
pertenece significativamente”.12
La ciudadanía se ejerce en la medida que logramos articular los intereses individuales con
los colectivos, teniendo a estos últimos como fin último de la participación ciudadana. La
ciudadanía está directamente relacionada con otros conceptos como el de autonomía,
participación, integración de formas colectivas de participación, entre otros.
La ciudadanía está directamente relacionada con el concepto de poder. “El poder tiene
múltiples determinaciones y es síntesis de diversas jerarquías sociales, por lo que ejercerlo
y enfrentarlo implica hacer planteamientos sobre el Estado y sus instituciones políticas,
jurídicas e ideológicas, incluyendo aspectos relacionados con el ámbito de lo privado, de
la ética, de la cultura y la economía”13
El poder tiene una aplicación positiva cuando se ejerce en función del bienestar colectivo,
para la ampliación del reconocimiento de derechos, para transformar estructuras que
discriminan y excluyen a determinados grupos sociales, y cuando se da en un contexto de
participación democrática.
El ejercicio de la ciudadanía de las mujeres está marcado por las desigualdades de género
que prevalecen en determinadas sociedades. De ahí que a pesar que desde hace varias
12
Ídem. Pág. 125 y 126
13
Aguilar, Dole, Herrera, Montenegro, Camacho, Flores: Movimiento de Mujeres en Centroamérica,
Pág. 32
18
décadas las mujeres conquistaron el derecho al voto, el reconocimiento de derechos y la
igualdad de oportunidades en los ámbitos sociales, políticos, económicos y culturales
continúa siendo una materia pendiente para la democracia moderna.
Las mujeres sobre la base de sus experiencias vitales marcadas por la falta de autonomía,
por una participación pública limitada a los escasos tiempos que se pueden liberar del
trabajo doméstico y del cuidado de la familia, y orientada principalmente a satisfacer las
necesidades de “otros”, en muchos casos se ven obligadas a retraerse de participar en el
espacio público; o refuerzan la tendencia a participar en actividades que de cierta manera
son la reproducción de la “ética del cuidado” que se desarrolla en el espacio doméstico-
familiar, evitando otro tipo de participación política que implique mayores exigencias.
Las escasas oportunidades que tienen las mujeres para acceder a la información y para el
desarrollo de habilidades, frecuentemente hacen que el ámbito público se presente como un
escenario difícil, desconocido, hostil y en muchos casos peligrosos.
A lo largo de la historia de nuestras sociedades tal y como lo señalan las autoras del libro
Movimiento de Mujeres en Centroamérica: “El sujeto subalterno es heterogéneo y su
construcción como sujeto político implica la promoción de la democratización de la
sociedad, incorporar lo cotidiano en la vida política y definir nuevos valores y objetivos
liberadores para la sociedad, lo que pasa entre otras cosas por la readecuación o
construcción del discurso. Lo que a su vez implica la definición de elementos articuladores,
de organicidad, de mecanismos de interlocución y de negociación frente al Estado y otros
actores”15
14
Aguilar, Dale, Herrera, Montenegro, Camacho, Flores: Movimiento de Mujeres en Centroamérica, Pág. 32
15
Idem. Pág. 33
19
democracia y ciudadanía, articulando las demandas que se derivan de las relaciones de
subordinación construidas en el ámbito privado, con aquellas relacionadas con la
discriminación que ocurre en el espacio público; en tal sentido también han logrado una
profunda articulación entre los así llamados intereses prácticos, con los intereses
estratégicos de las mujeres.
En tal sentido han identificado que en el marco de una cultura de discriminación, las
representaciones del cuerpo y de la sexualidad se constituyen en pilares de la subordinación
de las mujeres, toda vez que el cuerpo de las mujeres y su capacidad reproductiva se
convierten en los principales factores de control de los hombres para sostener relaciones de
dominación mediante las cuales se le niega a las mujeres su derecho a tomar decisiones en
principio sobre su cuerpo pero también sobre el uso y control de bienes simbólicos y
materiales que idealmente están al alcance de todos los ciudadanos.
Las reformas políticas fue un tema central de discusión por los diferentes actores, partidos
políticos, movimiento de mujeres, sociedad civil y los candidatos a la presidencia en la
campaña electoral del 2001.
En tal sentido los candidatos a la presidencia establecieron una serie de compromisos con
los diferentes actores mencionados.
Estos compromisos son retomados en El Dialogo Nacional –2003, establecido por el actual
gobierno que dirige el Licenciado Ricardo Maduro, en donde los partidos políticos asumen
el liderazgo a través de las bancadas de los partidos políticos representados en el Congreso
Nacional de la República, estipulando una serie de reformas a la Ley electoral, sin
considerar las propuestas de las mujeres tanto del movimiento de mujeres como de las
mujeres que integran los propios partidos políticos. Vale la pena explicitar que después de
conversar con las mujeres, introdujeron él capitulo de igualdad de oportunidades,
retomando textualmente él articulo 81 de la Ley de Igualdad de Oportunidades.
Frente a esta situación, el Movimiento de Mujeres Visitación Padilla, integrante de la
Convergencia de Mujeres-Honduras se presenta con su propuesta al Movimiento Cívico por
20
la Democracia logrando establecer una negociación para que se consideraran las propuestas
del Movimiento de Mujeres en la propuesta global de este movimiento.
Por otra parte las Mujeres de los cinco partidos políticos, aglutinadas en el grupo consultivo
del Foro por la Democracia se suman a la propuesta del movimiento cívico y piden la
participación del 50% en puestos de toma de decisión.
En este contexto el INAM, desarrolló dos estudios, el primero proporciona un análisis legal
sobre las diferentes propuestas de reformas a la ley electoral que están desarrollando los
diferentes actores, y la segunda un análisis sobre el porcentaje de Cuotas establecido en La
ley de Igualdad de Oportunidades.
Podemos afirmar que tanto las mujeres que integran los cinco partidos políticos como el
Movimiento de Mujeres/feminista, y el mecanismo del estado responsable de las políticas
públicas destinadas a mejorar la posición y situación de las Mujeres hondureñas, crearon un
ambiente de interés frente a las reformas políticas, específicamente lo relacionado a la
elaboración de la Ley Electoral a ser discutida en el Congreso Nacional.
Frente a esta situación el Instituto Nacional de la Mujer a través de su Ministra Marcela del
Mar Suazo planteo la necesidad de contar con un espacio donde se delimiten estrategias
comunes para la participación política de las mujeres
21
Integrar a las mujeres se convirtió en la tarea principal, fueron dos las preguntas
principales:
¿ Cómo hacer para que las mujeres de los cinco partidos políticos se sentaran a un dialogo
político?
¿ Cómo hacer para que las mujeres del movimiento amplio y feminista integraran la mesa
del dialogo político?
El Instituto Nacional de la Mujer, como ente rector de la las Políticas públicas destinadas a
mejorar la posición y situación de las mujeres hondureñas se propuso llevar a cabo un
proceso participativo en el eje de participación política de las mujeres, para ello contó con
investigaciones, reuniones, encuentros nacional y regional y la conformación de una
comisión integrada por mujeres de los partidos políticos, congresistas, del movimiento
amplio de mujeres y feminista y funcionarias del Instituto que guiaban el proceso, apoyadas
por una consultora nacional
Podemos afirmar que esta experiencia de dialogo, concertación y acuerdos entre mujeres
para unificar criterios y hacerle frente a una propuesta que plantee sus derechos, es una
estrategia valida y con alcances positivos. Esta estrategia dio muestras del avance que las
mujeres hondureñas tienen en materia del respeto a la diversidad de pensamiento y de la
capacidad de dialogar entre mujeres para buscar el consenso en un punto de interés común.
Una vez más se confirma que delimitando estrategias comunes las mujeres adquieren
fortaleza y pueden establecer diálogos y acuerdos.
Fueron dos semanas de intensa discusión en el Congreso Nacional, las mujeres ya sabían
que la Comisión de dictamen recomendaba solamente el 30% de participación política,
22
pero las diputadas de todos los partidos políticos se mantuvieron en la propuesta acordada
con el Movimiento de Mujeres/Feminista establecer el 50%. De participación política.
Es necesario rescatar el nombre de dos mujeres del Movimiento Visitación Padilla que
acompañaron a las Diputadas en todo momento de esta lucha en el interior del Congreso:
Gladys Lanza y Merly Eguigure, mujeres que se instalaron día y noche con teléfonos en
mano para estar llamando a cada diputado y recordarle su compromiso con las mujeres.
Así mismo debemos de registrar los nombres de esas mujeres que no dieron un paso atrás
en su posición: Doris Gutiérrez, Dilma Quezada, Victoria Contreras, Argentina Valle,
Guillian Guifarro, María Antonia Botto Handal, Marta Luisa Chávez, Rosa Adelina Pavón,
Ada Gabriela Mejía Mejía, estas mujeres mantuvieron su propuesta, es meritorio reconocer
en este proceso la solidaridad manifestada por hombres de los diferentes partidos
reconocer que fueron acompañadas por Diputados de los diferentes partidos políticos
destacándose: Ramón Villeda Bermudes, Jorge Arturo Reina, Arnold Sánchez, Omar
Cerna, Cesar Ham, Olvan Valladares y otros que no explicitaron su acuerdo pero votaron a
favor de la Igualdad de Oportunidades para las Mujeres.
Este proceso, se cristaliza en las dos semanas de discusión en el Congreso Nacional, los
artículos referentes a la equidad e igualdad de género, se pospusieron día a día por
considerarlos artículos en conflicto, los dejaron hasta él ultimo día, aprobándose por
mayoría calificada que no sería considerada la participación de las mujeres, es hasta horas
de la madrugada en la lectura del Acta que reconsideran su posición y a propuesta de un
diputado del Partido nacional que se había opuesto totalmente a la participación de las
mujeres, El diputado Rodolfo Zelaya, propone que se incorpore la participación con el
30%, eliminando las sanciones, quedando de esta forma el porcentaje de participación en el
Capitulo II de Igualdad de Oportunidades Políticas en el artículo 105.de La Ley Electoral. (
Se adjunta en anexo él capitulo).
Podemos señalar lo que la reunión de evaluación de este proceso planteó como ganancia en
este proceso. Las mujeres que participaron en toda la puesta en marcha de la estrategia
consideran que este proceso significa ganancia política y sobre todo la ganancia del
reconocimiento entre mujeres, podemos mencionar por lo menos los siguientes aspectos:
23
5. Identificación de los Diputados que tienen sensibilidad ante el tema de los
derechos de las mujeres y los cuales manifestaron su adhesión a la propuesta de las
mujeres, a pesar de haber recibido órdenes precisas para votar en contra, así como
también los Diputados que sin ningún escrúpulo acataron la orden.
24
ANEXOS
Bibliografía
25
LA GACETA
Diario Oficial de la República de Honduras
Año CXXVII, Tegucigalpa, Honduras C.A.
Número 30,390
Sábado 15 de Mayo del 2004
Capítulo II
Los Partidos Políticos deben crear las condiciones materiales que permitan la incorporación
real de las mujeres en todos los aspectos de la vida partidaria.
Para garantizar la no discriminación por razón de género, los Partidos Políticos aprobarán
internamente, con la participación de las mujeres, una política de equidad de género; cuyo
cumplimiento será supervisado por el Tribunal Supremo Ele ctoral. Los Partidos Políticos
estarán obligados a presentar al Tribunal un informe del cumplimiento de la política de
equidad de género, seis meses antes de la convocatoria a las elecciones internas y
primarias.
La violación por parte de los Partidos Políticos de cumplir con la política de equidad de
género será sancionada con una multa equivalente al cinco por ciento (5%) de la deuda
política.
26
Diputados propietarios y suplentes al Congreso Nacional, al Parlamento Centroamericano,
Alcaldes, Vice Alcaldes y Regidores.
27