Sei sulla pagina 1di 4

DIEZ IDEAS PARA EL RECICLAJE DE LLANTAS

Reconvertirlas en camitas para tus mascotas

Basta con pintar las llantas para darles un nuevo aire, meter dentro un cojín y la mejor

opción para que tu perrito o gatito entre sin problemas es recortar la llanta por un costado,

insertar un cojín coqueto, y listo.

Transformarlas en mesas de centro

La mesa requiere algo más de elaboración, pero el resultado merecerá la pena: duradero,

práctico y vistoso. Necesitas dos trozos de madera redondos y del mismo diámetro que la llanta.

Tras limpiar con cuidado el neumático que vayas a reutilizar, busca una cuerda que te guste, y

envuelve cuidadosamente la llanta (muy apretado). Luego fija las piezas de madera al

neumático con un taladro (hay quien lo hace antes), y pégale las patas. Si lo prefieres puedes

dejarlo sin patas y que semeje un puf. Aplica un sellado o encolado al neumático y la cuerda,

¡y ya lo tienes!

Un balancín para tus niños

Necesitas pintura, maderas (unos topes y otra que sirva de asiento del balancín, del

mismo ancho y largo que la mitad del neumático), un trozo de cuerda y unos clavos, así como

herramientas. Lo primero es cortar la llanta por la mitad. Luego, la pintas con un spray del

color que más te guste. Pones unas maderas en los bordes para que no se hundan, y encima, el
tablero que hará de asiento. A través de un agujero, puedes atarle una cuerdita para que los

niños se sujeten, y decorarlo como más te guste. les encantará.

Un columpio

Esta es una de las ideas más populares cuando hablamos de neumáticos reutilizados,

puesto que resulta fácil de hacer y queda muy bonita. Simplemente, necesitas una cadena y

unos anclajes con los que puedas sujetar éstas a la llanta vieja. Si gustas, puedes pintarla. Luego

lo cuelgas. Otra versión más sencilla es atar la llanta a una cuerda, por un solo punto, y colgarla.

Y listo.

Un macetero moderno

Sólo necesitas un jardín, tierra y las flores que más te gusten. Rellenas tu neumático y

tu jardín tendrá un rincón muy especial. Los más entusiastas pueden pintar cada llanta de un

color (o no).
Tiestos verticales

La versión del macetero en el jardín tiene su equivalente vertical en un neumático

colgado de la pared, que rellenamos con tierra y flores. Quedará especialmente bonito en un

espacio exterior. Parecerá, desde luego, un cuadro.

Lámparas de techo

Los más habilidosos pueden perforar su llanta antigua y crear diseños para una lámpara

a través de la cual pase la luz. Dentro, pondremos una bombilla, lo colgaremos a modo de

pantalla y nos servirá como una original lámpara. Si el espacio es amplio, conseguirás un

fantástico efecto industrial.

Un minion para tus herramientas

Con tres llantas, una encima de otra, que puedes unir con tornillos o cuerdas para que

no se desarmen, haces una torre. También puede ir sin fijación, simplemente apiladas. Con

pintura amarilla y un poco de arte, puedes pintar un minion u otra idea que te guste con spray,

te quedará una figura que hará las delicias de los más pequeños.
Sillas de exteriores

Si tienes dos llantas, y las pintas de colores, puedes fijarlas en el suelo y la pared, a

modo de respaldo y asiento. Las rellenas con cojines y tienes a continuación un rincón muy

especial.

Un marco de espejo reciclado

Si recortas tu llanta para que quede más finita, te puede servir para marco de un original

cuadro o espejo, con una bonita decoración.

Potrebbero piacerti anche