Sei sulla pagina 1di 2

Desde mi manera de verme a mi mismo, ver mi entorno y ver a las personas que me rodean, me

he dado cuenta, que todos mis problemas, sufrimientos y conflictos eran el fruto de no
comprender quien era realmente yo.

Y supongo, no lo afirmo, que sus problemas, sufrimientos y conflictos podrían tener la misma
causa, no comprender quienes son realmente.

No hablo de lo que somos para convencerlos, o para que acepten mis pensamientos, sino para que
puedan recordar quien realmente son, ya que ustedes como yo lo sabemos, siempre lo supimos,
por lo tanto; solo requerimos recordarlo.

En cada uno de nosotros existe un ilimitado saber, que todo lo conoce, por lo tanto, cada uno de
nosotros, sin excepción tiene acceso al mismo.

Requieren recordar lo que han olvidado, que no hay ni un solo grado de separación entre ustedes
y su vida. Ustedes y su vida son una y exactamente la misma cosa.

Por lo tanto, requieren dejar de temer a su vida, que en definitiva es dejar de temerse a si mismos.
Este temor es lo que los ha llevado a entrar en guerra con ella y con ustedes mismos.

Por este miedo han utilizado todo lo que está a su alcance para luchar contra lo único que en
realidad es real, su vida. Su vida y todo lo que ella contiene, que lo han etiquetado como negativo
o desagradable.

Luchan contra su vida, buscando protegerse del dolor, el temor, la tristeza, el malestar, el fracaso,
la enfermedad, la pobreza, la soledad, de todo aquello que les han enseñado y condicionados a
creer que son malas, horribles, nefastas y muy peligrosas, sin darse cuenta que al hacer esto han
elegido estar muertos en vida.

Esto los ha llevado a ponerse una armadura para protegerse de su propia vida, sin embargo, no les
protege de nada, en algunos casos solo los mantiene anestesiado o aislados de los demás.

El despertar espiritual, si es que realmente existe, desde mi entender, es darnos cuenta, es


recordad quienes somos realmente.
Creo que el despertar espiritual, el darnos cuenta nada tiene nada que ver con que estemos más
protegido o más seguros; tiene que ver con que recordemos, nos demos cuenta de que el Ser que
de verdad somos no requiere protección, que esta tan abierto a recibir, que es tan libre, que fluye
en él una profunda aceptación permitiendo que la totalidad penetre en él.

Una cosa es aceptar cuando todo va sobre ruedas y tienes la sensación de que la vida te sonríe, y
otra es aceptar en momentos de máximo dolor, cuando todo se derrumba a tu alrededor, cuando
las circunstancias te superan y se rompen todas las esperanzas.

De cada uno de nosotros depende como vamos a interpretar lo que nos sucede, si lo vamos a ver
como algo que se ha de evitar, trascender o incluso aniquilar o verla como lo que realmente es:
experiencia.

La pregunta que surge generalmente cuando hablo de la aceptación es ¿Cómo podemos aceptar lo
que pasa incluso cuando lo que pasa nos parezca totalmente inaceptable?

Hace mas de 3 años solo estoy compartiendo un mensaje, desde varios puntos de vista, sin
embargo, no deja de ser el mismo mensaje y el mismo es la aceptación.

Una profunda y confiada aceptación de cualquier cosa que se presente en nuestro camino.

No resignación, sino una aceptación profunda e incondicional de la experiencia del momento


presente, ya que la misma nos lleva inevitablemente hacia la más profunda aceptación de lo que
somos en esencia. El espíritu previo a la forma.

Y requerimos de la aceptación, para que cada uno sea capaz de poder aceptar lo que realmente es,
luego de recordar o darse cuenta de quien realmente es.

Sin la misma, como suelo decir, esto es misión imposible.

Potrebbero piacerti anche