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ENTONACIÓN

La entonación es la variación en la sucesión de alturas o frecuencias al pronunciar las


sílabas que componen las palabras que constituyen la oración, teniendo vinculación con
el contenido que se quiere comunicar. Con las variantes de entonación las cuerdas
vocales vibran de modo diferente en cuanto a su frecuencia.

Aplicando diferentes entonaciones, que funcionan a modo de señales, se puede


enunciar, preguntar, ordenar o expresar admiración. Además de clarificar si está
informando, preguntando u ordenado, sirve también para sistematizar el mensaje. No es
lo mismo decir: Viene el jueves, que decir ¿Viene el jueves? o ¡Ven el jueves! y
establece pausas entre enunciados.

Cuando enunciamos, la entonación sube hasta la primera sílaba acentuada, para luego
mantenerse casi a la misma altura, y bajar a partir de la última sílaba tónica, de modo
súbdito. Si en el enunciado se distinguen varios grupos fónicos (cada grupo fónico se
distingue pues se desarrolla entre pausas) todos suben el tono desde su sílaba final, a
excepción del último, donde el tono baja desde la última sílaba acentuada. Algo similar
ocurre en la exclamación pero con un nivel más alto.

Al interrogar, la entonación sube hasta la primera sílaba acentuada, luego desciende


hasta la sílaba tónica final y luego nuevamente sube hasta el final.

En Música se denomina entonación a la facultad de adecuarse quien canta, a los tonos


requeridos, con las curvas que la melodía exige, para hacerla agradable al oído; quien no
lo hace se dice que desafina. Ejemplo: “la maestra se enojó pues los niños desafinaron al
entonar el Himno Nacional”. Quien entona encuentra el sonido exacto, ni más agudo ni
más grave.

En Pintura se aplica a armonizar o graduar los colores o tonos para que sean
compatibles y realicen el valor estético.

Tipos de entonación

Entre los tipos de entonación se distinguen la enunciativa, la interrogativa y la


exclamativa, que marcan la diferencia entre esas modalidades oracionales.

Entonación de las oraciones enunciativas

Si la oración enunciativa consta de un solo grupo fónico, su línea melódica termina en


cadencia. El tono decae a partir de la última sílaba acentuada. Pero si la oración consta
de dos grupos fónicos, mientras que el primero termina en anticadencia o
semianticadencia, el segundo lo hace en cadencia.
En el caso de que la oración enunciativa esté compuesta por más de dos grupos fónicos,
pueden darse distintas configuraciones de la curva melódica, como el caso en que todos
los grupos fónicos acaban en anticadencia.

Entonación de las oraciones interrogativas

En las interrogativas directas totales, la curva melódica se caracteriza por una elevación
de la voz por encima del tono normal desde la primera sílaba acentuada, con un
descenso posterior hasta la penúltima sílaba, para elevarse luego en la última con un
tonema de anticadencia. Esta conformación de la línea melódica con ese ascenso inicial
por encima del tono normal, justifica en español el uso de los signos de interrogación no
solo al final, como en otras lenguas, sino también al principio.

En las interrogativas directas parciales, el tonema desciende terminando en cadencia. La


no terminación en anticadencia, como en el caso anterior, se debe a que el elemento
tónico inicial (pronombre o adverbio interrogativo) indica por sí solo la interrogación.

Si se trata de interrogativas disyuntivas, el primer miembro termina en anticadencia, y el


segundo en cadencia.

Entonación de las oraciones admirativas

Este tipo de oraciones ofrece una gama muy variada de estados anímicos en el hablante,
lo que hace compleja la descripción de su línea melódica. No obstante, en general, se
caracterizan por ascensos tonales rápidos seguidos de descensos bruscos; los descensos
dependen de las palabras que se quieren destacar.

Funciones

Función distintiva: la entonación permite distinguir la modalidad oracional.

Ejemplo: Saldrá ¿Saldrá? ¡Saldrá!

Función integradora: la entonación integra las palabras que forman la oración en una
unidad significativa.

Ejemplo: El niño estudia la lección.

Función delimitadora: se pueden agrupar las palabras en unidades oracionales menores


de significación o relación sintáctica.

Ejemplo: El niño / estudia / la lección.

La entonación como medio para trasmitir información

La entonación juega un papel fundamental en la naturalidad de la voz, entendida esta


como elemento de información suprasegmental.
Los tonos agudos suelen asociarse con estados anímicos emocionales, y los graves con
situaciones depresivas. El ascenso del tono se utiliza para despertar el interés del
interlocutor, lo que explica que el ascenso tonal caracterice a los enunciados no
terminados, a las preguntas, a las expresiones afectivas. Por el contrario, el descenso del
tono marca el final del enunciado afirmativo (tonema descendente), al no ser necesario
mantener el interés y la atención del oyente.

Se podría decir que cada hablante tiene su propio tono; las características de
pronunciación de cada individuo varían según su estado de ánimo y hábitos de
pronunciación. El oído de las personas es muy sensible a las características tonales, de
tal manera que se puede identificar a las personas por sus características de
pronunciación. También la entonación tiene en cada región cierta fisonomía propia. Así,
se dan hábitos de pronunciación peculiares a los que se llaman acentos; por ejemplo, se
pueden distinguir los acentos de un aragonés, de un gallego, de un catalán, de un
argentino, entre otros.

El conjunto de tonos, que forman la línea melódica o entonación, adquiere valores


lingüísticos significativos. Se trata de una de las principales características lingüísticas
de la oración y hace posible que las palabras, que forman la oración, adquieran valor
como unidad de sentido expresivo.

Importancia

La entonación es uno de los elementos más importantes para conseguir mayor


naturalidad en la conversación. La causa de esto se encuentra en que, en la mayoría de
las lenguas, la entonación juega un papel fundamental en la transmisión de la
información, tanto lingüística: acento en las palabras, estructura sintáctica, modalidad
oracional; como no lingüística: naturalidad, emoción, identidad del hablante, entre
otros.

Grupos fónicos y la pausa

Se denomina grupo fónico, al segmento de un discurso considerado como límite en una


pronunciación normal y no forzada, que queda delimitado por dos pausas o cesuras
sucesivas de la articulación. La longitud del grupo fónico no es fija, existen grupos
fónicos de solo una sílaba y los hay de hasta más de veinte sílabas.1 En el idioma
español por lo general el grupo fónico consiste de entre ocho a once sílabas, que se
corresponde con el desarrollo e importancia del verso octosílabo en la poesía española.
2Un grupo fónico podría constar de una sola palabra, por ejemplo "llueve". En
definitiva, se trata de unidades de entonación con un mínimo sentido. 3Los grupos
fónicos ayudan a que el que lee pueda respirar adecuadamente en las pausas y al que
escucha entienda mejor el mensaje.

El grupo fónico es una mera unidad fonosintáctica (pone límites al encadenamiento


fónico) y las pausas que lo delimitan pueden cumplir o no función melódica.
Sobre la pausa importa decir que no se ha distinguido convenientemente entre la que se
hace en la lectura y la que es propia de la lengua hablada, ni se ha dicho que la
normativa de utilización de pausa, dada por la RAE a propósito de los signos de
puntuación, responde antes que nada a la confección de lo escrito

- Pero la pausa es un recurso propiamente oral que sobrepasa los límites de la escritura.
No cabe ahora entrar en los pormenores de su funcionamiento en español, sino tan sólo
darles una idea de los variados tipos que he registrado y recopilado a través de una
somera relación.

Partiendo de la posible diferenciación entre pausas discursivas y no discursivas o


extratextuales, las pausas discursivas pueden dividirse como siguen:

- Tipo I: Con función ajustada a las necesidades fisiológicas de la fonación o pausas


espiratorio-inspiratorias.

- Tipo II: Con función de configuración discursiva: 1. Rítmico discursivas: idiomática y


poética; y esta última, rítmica o versal.

2. Con función dirigida a la confección del textum (entramado del texto): pausa de
selección paradigmática y pausa temática (especialmente la anacolútica).

3. Con función dirigida hacia la estructura homologada del texto: a) pausas de


organización textual (fragmentos textuales), tipo paralingüístico; b) pausas
delimitadoras de enunciados -que vienen a coincidir, pero no siempre, con las pausas
melódicas y con las de límite oracional-, son las pausas inicial y final absoluta; y c)
pausas enumerativas, significativas y sintácticas.

4. Con función expresivo-conativa: pausa ilocutiva con sus variantes expresiva,


conativa y expresivo-conativa.

5. Con función metalingüística: pausa de reticencia, de supresión o eufemística.

Comprobar la presencia de éstas y de otras posibles funciones de pausa en el texto


escrito y en el oral (con atención a modalidades en algún caso específicas) puede
constituir un buen ejercicio sobre cómo un fenómeno metafónico, la pausa, conlleva
amplias y variadas repercusiones lingüísticas y no lingüísticas.

6. A modo de recapitulación y tomando como más realista y avanzada la posición de


Quilis [1981] referente al papel segmentador de la entonación, se puede admitir, y
resulta muy provechosa para la enseñanza, la equiparación de planos, las bases de la
fonología oracional. Pero hay que advertir las distancias existentes entre la lengua
escrita y la lengua oral.

Si en el análisis del texto oral tomamos una entidad abstracta y aglutinante, como la que
propone la fonología oracional, lo que de hecho puede encontrarse en su interior es toda
una suerte de pausas cuya presencia impondría a la curva melódica un juego de
suspensiones mediante las cuales el hablante pone de manifiesto factores constitutivos
del discurso: las necesidades fisiológico-respiratorias, la adaptación a patrones
fonológicos, las necesidades del encadenamiento sintagmático, significativo y
sintáctico, la implicación discursiva de las funciones del lenguaje en general y de la
pragmática en particular, el orden de palabras, la presencia de factores extra textuales de
tipo convencional o no, etc.

RECOMENDACIONES ORTOGRÁFICAS

La Real Academia Española (RAE) define la ortografía como: "el conjunto de normas
que regulan la escritura de una lengua”. Antaño escribir correctamente y ser un buen
orador eran requisitos básicos e imprescindibles para ocupar cualquier puesto de
prestigio. La ortografía ha quedado muy tocada por la necesidad actual de escribir
rápido en los medios tecnológicos. Actualmente, el motivo más común para cometer
faltas de ortografía es la relajación a la hora de escribir los mensajes de texto, los
mensajes instantáneos entre los smartphones, en los chats de Internet o en las redes
sociales, pero una buen ortografía sigue siendo esencial para una buena imagen personal
y profesional.

No podemos poner en entredicho su importancia ya que el significado de una palabra


puede cambiar significativamente empleando “v” en lugar de “b”, “s” en lugar de “z”, si
lleva tilde o no, o por el uso incorrecto de los signos de puntuación, exclamación e
interrogación.

Hay algunos trucos que nos pueden ayudar a mejorar nuestra ortografía:

1. El primer consejo, como no podía ser menos, es leer. Es imprescindible fomentar la


lectura desde la infancia y es necesario fijarse. Leer ayuda a memorizar de forma
inconsciente miles de vocablos y su escritura gráfica.

2. La base, por supuesto, es estudiar y memorizar las reglas ortográficas y gramaticales


básicas. Pero existen instrumento como el Diccionario panhispánico de dudas, de la
RAE, que nos pueden ayudar a solventar nuestras inseguridades:

3. Otra buena manera de practicar son los dictados. Peor la mejor técnica es copiar
varias veces un texto, esto nos ayuda a memorizar visualmente la ortografía de las
palabras, y es uno de los mejores aliados, aunque con actualmente sea difícil porque
somos adictos al "Copiar y Pegar" del ordenador.

4. El corrector ortográfico es una manera dinámica de corregir la mayor parte de los


errores del texto, y si nos fijamos en los cambios que nos sugiere e intentamos entender
cuál es el error probablemente la palabra quedará ya fijada en nuestra memoria.

5. Con los diccionarios actuales en red http://dle.rae.es/?w=diccionario no tenemos


excusa para no asegurarnos de que estamos empleando la palabra correcta.
6. Si no sabes cómo se escribe cierta palabra, en lugar de arriesgarnos a cometer un
error, mejor intentamos buscar un sinónimo.

7. También nos ayudará hacer crucigramas o sopas de letras.

En este apartado te presentamos las reglas básicas de ortografía del español para disipar
todas tus dudas y evitar los errores más frecuentes.

La b y la v

El español actual no distingue fonéticamente las letras b y v. Descubre las reglas de


ortografía básicas para saber qué palabras con el fonema /b/ se escriben con b y cuáles
con v.

Ejemplo:

absolver

c, k, q, z

La letra c representa los fonemas /k/ y /θ/, que comparte con las letras ka (k), qu (q) y
con la zeta (z), respectivamente.

Ejemplo:

albaricoque, cereza

La g y la j

Según con a qué vocales acompañen, la g y j suenan igual en español. Descubre en este
apartado las posibilidades de pronunciación que ofrecen estas dos letras.

Ejemplo:

jengibre

La h

En español, la letra h es siempre muda. Te presentamos una serie de normas básicas


para saber qué palabras se escriben con h.

Ejemplo:

hola

ola

La ll y la y
Por lo general, no hay diferencia en la pronunciación de las letras y y ll en español.

Ejemplo:

fallar

yo

La r y la rr

La erre representa un sonido vibrante que puede sonar suave o fuerte. Además, puede
escribirse simple (r) o doble (rr). El uso de la forma simple o doble y el sonido que
representa depende de la posición de esta letra dentro de la palabra.

Ejemplo:

rato, raro, alrededor, correr

SIGNO:

PUNTUACIÓN

Los signos de puntuación son señales o marcas gráficas que permiten al redactor
estructurar un discurso escrito, al tiempo que le permite al lector identificar las
inflexiones del texto, es decir, el modo de entonación y las pausas necesarias que
facilitan su comprensión.

Los signos de puntuación cumplen una importante función en la lengua escrita, pues su
correcto uso permite comprender de forma coherente y sin ambigüedades el contenido
de un texto.

Los signos de puntuación poseen unas normas generales establecidas para hacer el
correcto uso de los mismos. Sin embargo, es posible, que cada individuo haga un uso
particular de los signos pero, considerando siempre las normas generales implantadas.

El punto

El punto (.) indica la pausa que se produce al final de un enunciado. Después de punto
siempre se escribirá con mayúscula, salvo en el caso de que aparezca en una
abreviatura. Existen tres clases de punto:

El punto y seguido: se emplea para separar los distintos enunciados que forman un
párrafo. Después de un punto y seguido se continúa a escribir en la misma línea.

El punto y aparte: separa párrafos distintos. Tras el punto y aparte, la escritura debe de
continuar en la línea siguiente, en mayúscula y sangrada.

El punto y final: es el punto que cierra un texto.

La coma
La coma (,) marca una pausa breve dentro de un enunciado.

Se emplea para separar componentes de la oración o sintagma, salvo que este precedido
por alguna conjugación como y, e, o, u, ni. Por ejemplo, “Andrea llegó de la escuela,
hizo los deberes, tomó baño y se durmió”.

Se usa para encerrar incisos o aclaraciones y para señalar omisiones. Por ejemplo, “Si
vienes, te esperamos; si no, nos vamos”.

Separa la parte entera de un número de la parte decimal. Por ejemplo, 3,5 km.

Las locuciones conjuntivas o adverbiales van precedidas y seguidas de coma. Por


ejemplo, en efecto, es decir, en fin.

Los dos puntos

Los dos puntos (:) representan una pausa mayor que la coma, pero menor que la del
punto. Se usa en los siguientes casos:

Antes de una cita textual y como un llamado de atención. Por ejemplo, “Dice el refrán:
más vale tarde que nunca”.

Antes de una enumeración. Por ejemplo, “Las cuatro estaciones del año son: primavera,
verano, otoño e invierno”.

Tras las fórmulas de cortesía que encabezan las cartas y documentos. Por ejemplo,
"Estimada profesora:"

Entre oraciones relacionadas sin nexo cuando se expresa causa – efecto o una
conclusión. Por ejemplo, “Perdió el trabajo, la casa, el carro: todo por el juego”.

El punto y coma

El punto y coma (;) representa una pausa mayor que la coma, pero menor que la del
punto y seguido. Se emplea en los siguientes casos:

Para separar los elementos de una enumeración cuando se trata de expresiones


complejas que incluyen comas. Por ejemplo, “Su pelo es castaño; los ojos, verdes; la
nariz, respingona”.

Ante las conjugaciones (pero, aunque y mas), cuando se introduce una frase larga. Por
ejemplo, "Hace muchos años deseaba visitar ese lugar; pero hasta el sol de hoy no había
tenido oportunidad".

Los puntos suspensivos

Los puntos suspensivos (…) están formados por tres puntos en línea y sin espacio entre
ellos. Se emplea en los siguientes casos:
Al final de las enumeraciones abiertas, con el mismo valor que el etcétera. Por ejemplo,
“1, 2, 3, …”.

Cuando se deja una expresión incompleta o en suspenso. Por ejemplo, “A pocas


palabras…”.

Para expresar dudas, temor o vacilación.

Cuando se reproduce de forma incompleta una cita textual, texto o refrán. Por ejemplo,
"Cuando Gregorio Samsa se despertó (...), se encontró sobre su cama convertido en un
monstruoso insecto" (Kafka, La metamorfosis).

ENTONACIÓN

Los signos de entonación son los signos que indican al escribir si una expresión es
exclamativa o interrogativa, dando el tono de exclamación o de interrogación a la
expresión.

En español se utilizan un signo de apertura y uno de cierre para delimitar la frase u


oración que modifica, a diferencia de lenguas como la inglesa y la francesa en donde
solo se usa un signo de exclamación o interrogación al final de la oración para
identificar si es pregunta o exclamación la expresión a escribir.

La interrogación y la exclamación

Los signos de interrogación (¿?) y exclamación (¡!) son dos: el de apertura y cierre, que
se colocan al principio y al final del enunciado respectivamente. En nuestra lengua es
obligatorio poner siempre el signo de apertura, que no deberá suprimirse a imitación de
otras lenguas. Estos signos encierran enunciados que, respectivamente, interrogan o
exclaman. Los primeros se emplean para delimitar enunciados interrogativos directos;
los segundos, demarcan enunciados exclamativos e interjecciones. Ejemplos:

¿Has traído los libros que te pedí?

¡Cómo me alegro de que estés aquí¡

AUXILIARES O DE AGRUPACIÓN

Signos auxiliares o de agrupación son aquellos que señalan pautas convencionales en


los textos escritos, y de tal modo que ayudan a una mejor comprensión de los mismos.
Por eso son “auxiliares” de la puntación.

El paréntesis ( ) enmarca un enunciado que aporta información adicional, secundaria o


aclaratoria sobre el mensaje principal. El paréntesis lleva por regla general por fuera un
espacio antes y después, pero no por dentro.
Ejemplo:

El conocido como «Príncipe de los Ingenios» (Miguel de Cervantes) es homenajeado


cada año durante la Feria del Libro de Madrid.

La raya (—), más ancha que un guion (-) puede introducir incisos o una aclaración,
como lo hace los paréntesis ( ), en cuyo caso se utiliza una de apertura y otra de cierre, o
las intervenciones de cada interlocutor en una conservación.

Ejemplo:

Fournier y Heinrich —mis adorados gatos— me despiertan todos los días a las 6 de la
mañana.

El guion (-), más estrecho que la raya (—), se utiliza principalmente para señalar al final
de un renglón que una palabra no ha cabido por longitud y que continúa en el renglón
siguiente. También permite formar palabras compuestas.

Ejemplo:

Hoy he estado dando un paseo por el par - que hasta que se ha puesto el sol.

Las comillas latinas (« »), inglesas (“ ”) o simples (‘ ’) se utilizan en la reproducción de


citas textuales, títulos o palabras de otros idiomas.

Ejemplo:

Pepa: «Esta noche habrá luna llena».

«Las obras terminarán en agosto», aseguró la ministra.

«En un lugar de la Macha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho


tiempo...». (Quijote, Miguel de Cervantes)
ORACION SIMPLE

El término oración proviene del latín oratio y tiene varios usos. Para la gramática, se
trata del constituyente sintáctico más pequeño posible que es capaz de expresar una
proposición lógica. Por lo tanto, es una palabra o un conjunto de palabras con
autonomía sintáctica.

La oración simple es la que está formada por un sólo verbo en comparación con la
compuesta que está formada por más de un verbo. Toda oración simple está formada
por el sujeto que puede venir expresado en la oración o ser omitido y por el predicado
formado a su vez por el verbo más los complementos oracionales que le acompañen.

Las oraciones simples suponen la estructura más sencilla entre todas las oraciones, ya
que no pertenecen a ninguna unidad gramatical mayor. Esto quiere decir que, gracias a
su simpleza, son las oraciones más utilizadas en la infancia y en aquellos que se
encuentran en proceso de aprendizaje de un idioma.

Las oraciones simples pueden clasificarse de acuerdo a su significado (existen oraciones


simples enunciativas, imperativas, interrogativas, dubitativas y desiderativas) o según el
tipo de predicado (oración simple atributiva u oración simple predicativa).
En el caso de las oraciones simples predicativas, pueden dividirse en predicativas
activas (cuando el sujeto realiza la acción) y en predicativas pasivas (cuando el sujeto
recibe la acción).

Una nueva división puede realizarse a partir de las oraciones predicativas activas en
transitivas, intransitivas, recíprocas y reflexivas, mientras que las oraciones predicativas
pasivas pueden organizarse en propias e impropias. Como puede verse, las oraciones
siempre pueden ser clasificadas de acuerdo a numerosos grupos.

“Esteban compró un casa”, “Marta viajó a Quito”, “Pedro tiene un gato negro” y “Lucía
rompió la ventana” son algunos ejemplos de oraciones simples.

Tipos de oraciones simples

La clasificación se realiza teniendo en cuenta tres aspectos:

Según el tipo de predicado

Predicativas: son las oraciones formadas por verbos predicativos, es decir, no


copulativos (ser, estar, parecer) tanto en voz activa (transitivas, intransitivas, recíprocas,
reflexivas) como en voz pasiva (pasiva analítica, pasiva refleja).

Copulativas: las oraciones copulativas son aquellas formadas por un verbo copulativo
(ser, estar, parecer).

Según la actitud del hablante

Enunciativa: informa o habla de un hecho objetivo.


Interrogativa: pide información o expresa mandatos o sugerencias de manera sutil.

Exclamativa: expresa una emoción, alegría, tristeza, sorpresa, susto, miedo, etc.

Desiderativa: expresa deseo, solicitud, posibilidad, etc.

Dubitativa: expresa duda o posibilidad de algo.

Según la estructura

Impersonal: Son oraciones en las que no existe o no se conoce el sujeto.

ESTRUCTURA

Las oraciones simples son las que constan de sujeto y predicado, y se refieren a una sola
acción o descripción. El sujeto es simple, y el predicado describe una acción o
descripción del sujeto o sujetos.

Que está formada por un solo verbo que indica una sola

Acción verbal: ORACION: ESTRUCTURA GENERAL:

La oración consta de 7 partes principales:

1. SUJETO: Es la palabra o palabras de las cuales se dice algo.

Sujeto es una parte de la oración gramatical compuesta por la persona, animal o cosa de
la que se habla o que lleva acabo la acción del verbo, es decir que el sujeto es aquella
parte de la oración que responde a la pregunta ¿Quién?

2. NUCLEO DEL SUJETO: Es la palabra principal del sujeto el núcleo del sujeto es la
palabra más importante de las que conforman el sujeto de la oración ya que es la
persona, animal o cosa sobre la que recae la acción del verbo.

3. MODIFICADOR DEL SUJETO: Es la palabra que se agrega o dice más del sujeto en
el mismo sujeto.

4. CLASE DE SUJETO: Si es simple, compuesto, complejo, incomplejo, expreso,


tácito, según esté conformada la oración.

5. PREDICADO: Es todo lo que se dice del sujeto o también las palabras que expresan
lo que se afirma o se niega de él.

6. CLASE DE PREDICADO: Puede ser: NOMINAL, si está conformado por el verbo


SER O ESTAR, (verbo copulativo). En cualquier tiempo y conjugación, modo etc. Y
también puede ser VERBAL, si está conformado por un verbo diferente a SER O
ESTAR, Verbo transitivo.

7. NÚCLEO DEL PREDICADO: Si, el predicado es nominal, el núcleo es el sustantivo


o adjetivo que acompaña al verbo.
Si, el predicado es verbal el núcleo es el mismo verbo.

OTRA ESTRUCTURA DE LA ORACION SIMPLE:

La oración simple puede tener otra estructura, así.

1. SINTAGMA NOMINAL O FRASE NOMINAL: Es el nombre o el mismo sujeto.


Su función sintáctica principal es la de ser el sujeto de una oración, aunque puede
realizar otras funciones de complemento.

2. SINTAGMA VERBAL O FRASE VERBAL: Es el verbo o el mismo predicado.

3. FRASE PREPOSICIONAL: Es la preposición acompañada de una frase nominal.

Veamos en el siguiente ejemplo:

EL GATO ES UN ANIMAL DOMÉSTICO,

Frase nominal o sintagma nominal: el gato

Frase verbal o sintagma verbal: Es un animal doméstico

AHORA: En la oración: EL PERRO Y EL GATO COMEN CARNE EN EL MISMO


PLATO: Tenemos:

FRASE NOMINAL O SINTAGMA NOMINAL: EL PERRO Y EL GATO = SUJETO.

FRASE VERBAL O SINTAGMA VERBAL: COMEN CARNE.

FRASE PREPOSICIONAL: EN EL MISMO PLATO, Como podemos ver la frase


preposicional comienza desde la preposición EN y va acompañada de una frase nominal
EL MISMO PLATO.

EJEMPLOS:

El sujeto está subrayado y el predicado en negritas.

1. Juan corre todos los días.

2. María se peina muy temprano.

3. Vengo cansado.

ARTICULACION DEL SUJETO

El sujeto puede estar formado por un sustantivo con o sin artículo: La Luna en el mar
riela; ¨Civilización es espíritu¨. Muchas veces un sustantivo no es suficiente por sí solo
para expresar el sujeto con todas las notas que interesan, y entonces recibe ampliaciones
o determinaciones de significado. En estas expresiones articuladas el sustantivo básico
se llama núcleo y los añadidos que amplían o precisan su significado se llaman
complementos. Las formas más sencillas de ampliar o precisar el significado son las
siguintes:

a) Sustantivo con adjetivo: ¨La luna llena alumbra el campo¨; ¨La civilización moderna
no ha hecho al hombre más feliz¨.

b) Sustantivo con preposición y otro sustantivo: ¨La civilización del mundo peligra ¨Un
hombre sin conciencia siempre es peligroso¨.

c) Sustantivos en aposición: ¨Buenos Aires, capital de la Argentina, es la ciudad más


grande de habla español¨.

d) Dos sustantivos unidos por conjunción: ¨el cazador y su perro se fueron campo
adelante¨.

En La luna llena ¨La luna¨ es el núcleo o base de la construcción y ¨llena" es su


complemento. En la civilización del mundo, ¨la civilización" es el núcleo o base y ¨del
mundo¨ es su complemento:Este complento consta de dos partes: la preposición y su
término. se llama término al sustantivo que sigue a la preposición.

El complemento de aposición, a diferencia del de preposición, nombra al mismo objeto


que el núcleo o sustantivo básico, aunque de otro modo: ¨Augusto, primer emperador de
Roma, murió el año 14 de la era cristiana¨.

Cuando el sujeto consta de dos sustantivos unidos por conjunción, el primero no es


núcleo del segundo ni el segundo complemento del primero: ambos forman una serie en
la cual son gramaticalmente equivalentes: ¨Han llegado Juan y Antonio¨.

Los complementos del sustantivos puede recibir complementos para ampliar o precisar
su signifcado:

a) El adjetivo puede complementarse con un adverbio: ¨Una luz demasiado brillante


ciega los ojos¨. Puede complementarse el adjetivo con preposición y sustantivo: ¨Las
casas faltas de luz y de aire son pocos saludables¨.

b) El sustantivo que sigue a la preposición puede complementarse también con los


complemenetos normales del sustantivo: ¨La civilización del mundo moderno peligra¨;
¨Un hombre sin conciencia de su deber es nocivo para la sociedad.

ARTICULACION DEL PREDICADO

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