Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Rocío Zea
1. Dificultades de Comunicación:
Ante esto la señora se molestó mucho e inició un reclamo a dos de las trabajadoras
de la compañía que cada vez se tornó más agresivo, empezó levantando la voz y
gritándolas, frente a lo cual ellas optaron por ignorarla, esto la alteró aún más y finalmente
empezó a lanzar objetos intentando agredirlas para llamar su atención.
En segundo lugar, hay que tener en cuenta las conductas de las trabajadoras, quienes
con su respuesta contribuyeron a que la situación se convirtiera en un ciclo de agresividad
que fue en aumento. Ellas se mostraron indiferentes desde el inicio, con su lenguaje no
verbal transmitían apatía lo que la usuaria percibía como una agresión directa. Cuando la
situación se tornó peor, ambas trabajadoras hicieron un intento inicial de ignorarla y
continuar hablando entre ellas. Esta puede ser una conducta percibida como agresiva y
desafiante, aunque no la hayan atacado de una manera directa.
Es evidente que ambas partes pudieron desplegar otro tipo de conductas para evitar
que la situación escalara de la manera en que finalmente lo hizo. Ambas partes hubieran
podido ponerse en el lugar la otra persona a la hora de reaccionar, comprendiendo las
emociones que habían detrás de la respuesta que estaba emitiendo en ese momento cada
una de las personas involucradas.
Es probable que, debido a la huelga, las trabajadoras durante el día hubieran tenido
que enfrentar situaciones parecidas, lo cual puede haber hecho que estuvieran predispuestas
desde el inicio al reclamo. De esta manera podemos evidenciar la existencia de emociones
previas que inclinaban a un tipo particular de respuesta. Así es fundamental resaltar la
importancia de las emociones que ya había antes, las cuales activaron un ciclo que inicia
con el reclamo que hace la usuaria en tono agresivo y que continúa la respuesta de
indiferencia, las emociones aumentan en ambas partes, la usuaria se molesta mucho más y
empieza a lanzar objetos, lo que hace que la situación se salga de control. Para finalizar esta
situación otras personas tuvieron que intervenir, invitando a ambas partes a dialogar y
mantener la calma.
Probablemente el dialogo asertivo desde el inicio hubiera podido ser una conducta
alternativa que hubiera logrado resolver la situación de manera distinta. Inicialmente la
empatía hubiera posibilitado respuestas que disminuyeran la agresividad de la otra parte,
ayudando a disminuir el conflicto en lugar de aumentarlo. La usuaria hubiera podido hacer
su reclamo en un tono mucho menos agresivo y las trabajadoras hubieran podido mostrar
un interés genuino y una actitud más receptiva. Prestar una ayuda, aunque fuera solo en
forma de escucha, hubiera logrado que la situación tuviera un desarrollo distinto.
3. Análisis de la situación:
En este sentido, la agresión de la usuaria tenía un carácter tanto reactivo dado que
estaba respondiendo a una situación que le producía ira, pero también instrumental, ya que
esperaba conseguir por medio de esta, la atención no solo de las trabajadoras, sino
particularmente de la compañía para que su problema pudiera ser resuelto con rapidez. Por
esto también es importante preguntarse por el papel adaptativo de la ira en algunas
circunstancias, ya que, aunque frecuentemente es catalogada como una reacción
socialmente negativa, en algunos momentos también nos ayuda a conseguir resolver
situaciones que se presentan.
Valzelli (1983, Citado por Alcazar y Ortega, 2016) afirma que la agresividad tiene
un componente adaptativo y tiene la función de satisfacer determinadas necesidades y
protegerse de posibles amenazas o daños contra la integridad personal. De esta manera es
importante resaltar que la agresividad no solo cumple una función de daño hacia el otro,
sino que inicialmente tiene una función de carácter adaptativo. Aunque en muchos casos la
agresión se cataloga como negativa, muchas veces es socialmente aceptada y catalogada
como respuesta esperada, en este caso por ejemplo muchas personas presentes apoyaban la
molestia de la usuaria.
Es importante también tener en cuenta las diferencias que existen entre la forma de
reaccionar de distintas personas, ya que frente a una misma situación no todos los seres
humanos tienen la misma respuesta. Alcázar y Ortega (2016) mencionan que la agresividad
es el resultado de la presencia de ciertos eventos que desencadenan en el individuo la
respuesta agresiva (Gronde, Kempes, van El, Rinne y Pieters, 2014, Citado por Alcázar y
Ortega, 2016), y subrayan el papel de las circunstancias, afirmando que la personalidad y
las experiencias tempranas no son totalmente predictoras de las conductas agresivas ya que
las condiciones situacionales son determinantes lo que enfatiza nuevamente la conducta
agresiva como una respuesta natural.