INTRODUCCION

El punto de partida para la comprensión de las condiciones de vida favorables que

deben ser brindadas a los colaboradores por parte de las empresas sin importar su
nivel de riesgo es la relación que existe entre el hombre y el trabajo, ya que este
forma parte fundamental para la supervivencia, construcción y mejoramiento
integral de las condiciones no solo de vida, sino también de salud las cuales
benefician de forma positiva o negativa dependiendo de la percepción subjetiva al
grado de satisfacción al momento de desarrollar una actividad para la obtención de
dichas condiciones.

Al ser necesario el trabajo para alcanzar dicha satisfacción, es importante resaltar

que la salud y enfermedad no son aspectos extraños en la condición humana, ya
que forman parte de la naturaleza del hombre y es conocido que el trabajo es un
factor determinante que incluye posibles consecuencias significativas en la
generación de riesgos para la seguridad y salud de un trabajador y en este sentido
influye los problemas que puedan presentarse por fuera del lugar de trabajo como
el ámbito familiar y estado de salud mental que en general afectan al trabajador y
que no está directamente relacionado con la ocupación.

De acuerdo con la Organización Internacional de Trabajo, OIT, cada año ocurren

cerca de 160 millones de enfermedades laborales no mortales y de las 2,34 millones
de muertes anuales relacionadas con el trabajo, dos millones son por enfermedades
laborales. De otra parte la Organización Mundial de la Salud, OMS, estima que la
tasa de morbilidad calculada para la enfermedad laboral es de 300 a 500 casos por
cada 100 mil trabajadores cada año. Los reportes internacionales, en particular los
de la Unión Europea, indican que 23 millones de personas reportan problemas de
salud relacionados con el trabajo.1

A nivel mundial existe una tendencia progresiva de la enfermedad laboral que según
la OIT puede deberse a la mejora en los sistemas de vigilancia de la salud y de
indemnización, a la modificación de los procesos de trabajo y su organización, al
mejor conocimiento de las enfermedades laborales entre los trabajadores y
empleadores y al impacto de las enfermedades de larga latencia. La frecuencia
absoluta de enfermedad laboral calificada en los últimos años, por parte de las
Administradoras de Riesgos Laborales en Colombia ha sido con tendencia
creciente. Esto puede obedecer al incremento paulatino en la cultura de reporte y
calificación en primera oportunidad por parte de las Entidades Promotoras de Salud,
EPS, y a la generación de políticas país que se reflejan en la nueva tabla de
enfermedad laboral y en los estándares de reconocimiento y calificación.2

1 FEDERACIÓN DE ASEGURADORES COLOMBIANOS (Fasecolda). Prevención de la enfermedad

laboral en Colombia. [En línea] (2016) < http://www.fasecolda.com/index.php/sala-de-
prensa/noticias/2016/enero1/sector-febrero-16-2016/> [Citado en 20 de septiembre de 2018]
2 Ibid., p. 1.
El Ministerio del Trabajo ha intervenido en materia de Medicina, Higiene y Seguridad
Industrial estableciendo disposiciones que permitan preservar el equilibrio en el
trabajador y así lograr mejores condiciones a los trabajadores en la ejecución de las
diferentes actividades. De esta forma, es importante evaluar en qué grado las
empresas cumplen con buenas condiciones de trabajo para sus colaboradores y la
forma de vida de los mismos debido a que esto fundamenta las bases para la
correcto desempeño de sus funciones y la productividad en los lugares de trabajo.