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Horizontes futuros de la ética sexual católica

(Prof. Dr. Konrad Hilpert)


ASAMBLEA PLENARIA EL 26./27. ABRIL 2013
Se ha vuelto a hablar de la ética sexual católica durante algunos
años, dentro y fuera del público eclesiástico. Sin embargo, el
interés no es apreciativo, ya que uno encuentra un complejo de
orientación que agradece, convence o incluso vale la pena
considerar. Más bien, uno puede tener la impresión de que el
interés está en la forma en que lo pone en un argumento notorio
de que ya se considera extinto, pero que, sorprendentemente,
todavía vive, y en el que se confía todo, incluso lo peor. ¿Qué pasó
allí, así es como es?

I.
El evento más obvio en el sentido de un proceso desencadenante
fue el anuncio de casos de abuso sexual de niños y confiados por
sacerdotes. Especialmente la frecuencia de los casos y las malas
consecuencias, a menudo de por vida, para las víctimas
conmocionadas. Como debilidades reflexivas, se revelaron la
relación entre cercanía y distancia, el descuido de la educación
holística como personalidad integral y los mecanismos de
selección de futuros sacerdotes. El daño a los perpetradores y los
mecanismos de autoprotección de la institución, la reputación y la
confianza hacia la iglesia y sus altos estándares de ética sexual
fueron aún más dañinos. La cancelación de la misión de una
investigación criminológica a gran escala hace unos meses
también alimentó la sospecha de que el problema no era tan
difícil. Entre estos dos eventos, un debate prolongado sobre el uso
de condones como herramienta de prevención contra la infección
por VIH, impulsado por una sola frase del Papa en una entrevista
de muchas horas, ha sido visto por muchos como una apertura de
la posición tradicional. fue interpretado; pero cuando se considera
con seriedad, también puede sorprender que un comentario sobre
el uso del condón en prostitutas masculinas haga tanto
escándalo. ¿No podrías preguntar aquí? si la iglesia no debería
tener problemas más importantes? Recientemente, el anuncio del
caso de una mujer violada causó una gran indignación, a la que los
médicos de guardia le negaron asistencia en dos hospitales
católicos en Colonia. Las pautas se cambiaron inusualmente
rápidamente, señalando los efectos no abortivos de las nuevas
drogas; pero en el argumento, así como en el procedimiento,
quedaban muchas preguntas abiertas.
Se podría decir, y muchos querían verlo de esa manera, estos son
casos malos, lo suficientemente lamentables, pero solo casos
aislados. Otros pensaron que era improvisado, donde un asunto
complicado había caído en las personas equivocadas, o se había
hundido en una trampa pública diseñada para validar la imagen de
la iglesia como anticuada, sexualmente hostil, insensible a las
mujeres. Solo necesita una regulación más fina de la iglesia y un
suplemento de los estándares éticos aplicables.
Pero todo esto, evidentemente, no es suficiente. más bien, todo
indica que los problemas y debates mencionados están en un
contexto y en una línea fatal de desarrollo y que simplemente no
ocurren sin una razón tal como lo percibimos y tuvo que soportar
como católicos sobre nosotros. Son síntomas de la Constitución,
en el que la institución se encuentra en este terreno. Por otra
parte agravante de que también hay una serie de situaciones y
problemas nuevos en el campo de la ética sexual que reciben
ninguna o sólo respuestas ásperas en innumerables documentos y
declaraciones de la iglesia, como la gran lámina reciente hecha de
una pregunta tabloide de cómo las percepciones de los
consumidores de porno de niños peligrosa cambiado y la
sexualidad de los jóvenes.
Las razones de la difícil situación de la ética sexual parecen
recaer no solo en los actores torpes y los representantes que
aparecen en los medios de comunicación como defensores de las
posiciones de la iglesia o se les pide que voten por el principio "El
extraño, mejor para la dramaturgia". Pero también tiene que ver
con la naturaleza del razonamiento ético, con los desarrollos
sociales y la relación entre la iglesia, la jerarquía y la teología, así
como con la espiritualidad. Por lo tanto, en lo siguiente
simplemente hablo de problemas de teoría, problemas de
desarrollo social, problemas de eclesialidad y problemas de
espiritualidad.

II.
1. Problemas de teoría: los dos puntos más desagradables en la
ética sexual tradicional son la referencia a la naturaleza humana
de la naturaleza y la penetración de prohibiciones concretas de la
tradición. Ambos tienen indudablemente su legitimidad y su
tamaño. Pero la "naturaleza" solo puede encerrar un espacio de
improbabilidad, que también debe ser constantemente medido
nuevamente; y las recomendaciones concretas para la acción, tal
como las encontramos en la tradición, requieren una hermenéutica
que tenga en cuenta el contexto histórico y social. Todo lo que
tiene que hacer es verificar y registrar lo que ya ha sido justificado
por estos argumentos, y rápidamente queda claro cuán arbitrarios
o sobrecargados pueden ser tales argumentos, especialmente con
respecto al diseño de la sexualidad.

2. Problemas del desarrollo social: puedo limitarme aquí a tres


referencias, a saber, la posibilidad de controlar la concepción, ya
que nunca ha existido en la historia humana, la necesidad del
trabajo de identidad y sus efectos en la búsqueda de una pareja y
la creciente independencia las mujeres La capacidad de controlar
la concepción limita al menos severamente "el poder del
destino". "Aquellos que practican la sexualidad deben esperar el
embarazo" fueron la lógica real de la ética sexual tradicional, que
estaba prohibida principalmente. Incluso hoy, la mayoría quiere
una sexualidad con responsabilidad. Pero muy pocos aceptan que
deberían ser forzados al prohibir el control del embarazo. Con
respecto a las citas, la situación para la mayoría de los jóvenes se
ha vuelto considerablemente más complicada, ya que los actores
no están seguros de sí mismos una vez que alcanzan la madurez
sexual, y mucho menos a su pareja, a la que generalmente ya no
encuentran en el mismo entorno. y aprende a apreciar. Y
finalmente, las mujeres ya no se preocupan únicamente por el
probable papel posterior de la madre, sino que tienen sus propios
planes y expectativas para su biografía. No ser atendido es el
objetivo decisivo en la vida, sino tener varias opciones, es decir,
poder trabajar, la maternidad, diseñar de forma independiente el
propio espacio de vida, poder realizar una carrera, y todo
negociado a la altura de los ojos. en la medida en que los actores
no estén seguros de sí mismos cuando hayan alcanzado el punto
de madurez sexual, y mucho menos a su pareja, a la que
generalmente ya no encuentran en el mismo entorno y aprenden a
valorar. Y finalmente, las mujeres ya no se preocupan únicamente
por el probable papel posterior de la madre, sino que tienen sus
propios planes y expectativas para su biografía. No ser atendido es
el objetivo decisivo en la vida, sino tener varias opciones, es decir,
poder trabajar, la maternidad, diseñar de forma independiente el
propio espacio de vida, poder realizar una carrera, y todo
negociado a la altura de los ojos. en la medida en que los actores
no estén seguros de sí mismos cuando hayan alcanzado el punto
de madurez sexual, y mucho menos a su pareja, a la que
generalmente ya no encuentran en el mismo entorno y aprenden a
valorar. Y finalmente, las mujeres ya no se preocupan únicamente
por el probable papel posterior de la madre, sino que tienen sus
propios planes y expectativas para su biografía. El objetivo
decisivo en la vida no es cuidarlo, sino tener varias opciones, es
decir, poder trabajar, la maternidad, diseñar de manera
independiente el propio espacio de vida, poder realizar una carrera
y todo negociado a la altura de los ojos. Y finalmente, las mujeres
ya no se preocupan únicamente por el probable papel posterior de
la madre, sino que tienen sus propios planes y expectativas para
su biografía. El objetivo decisivo en la vida no es cuidarlo, sino
tener varias opciones, es decir, poder trabajar, la maternidad,
diseñar de manera independiente el propio espacio de vida, poder
realizar una carrera y todo negociado a la altura de los ojos. Y
finalmente, las mujeres ya no se preocupan únicamente por el
probable papel posterior de la madre, sino que tienen sus propios
planes y expectativas para su biografía. El objetivo decisivo en la
vida no es cuidarlo, sino tener varias opciones, es decir, poder
trabajar, la maternidad, diseñar de manera independiente el propio
espacio de vida, poder realizar una carrera y todo negociado a la
altura de los ojos.
3. Problemas de la iglesia: el problema de la naturaleza
eclesiástica de la fe y la teología se ha considerado durante
mucho tiempo lo más cercano posible a la jerarquía y la profesión
docente. Por un lado, esta unidad fue fuertemente apoyada y
promovida, y por otro lado, fue ayudada con medidas de
control. Aparte de ciertos grupos en la iglesia, una cosa ya no
funciona, también porque las personas tienen alternativas y
orientaciones que no se pueden obtener simplemente desde el
pedestal alto; Por otro lado, esto ya no es posible, porque se dan
cuenta de que tienen que plausiblemente plausibilizar las
posiciones tomadas por ellos y defenderlos contra los demás. Pero
lo que aún es posible, al menos en parte, es el control mediante
quejas, Reservado para citas y, en caso necesario, retirada de
autorización docente. Afortunadamente, eso ocurre solo
raramente; pero el miedo a esto está indudablemente allí, y es
responsable del hecho de que la ética sexual es ahora un campo
de reflexión teológica particularmente débil y no resuelto, a
diferencia de otras áreas de la acción humana y la formación de la
sociedad. Evite el problema al no hablar de ello. Afortunadamente,
esto ha mejorado en los últimos dos o tres años, lo que
obviamente tiene que ver con la conmoción de los casos de
abuso. que la ética sexual es ahora un campo de reflexión
teológica particularmente débil y no resuelto, a diferencia de otras
áreas de la acción humana y la formación de la sociedad. Evite el
problema al no hablar de ello. Afortunadamente, esto ha mejorado
en los últimos dos o tres años, lo que obviamente tiene que ver
con la conmoción de los casos de abuso. que la ética sexual es
ahora un campo de reflexión teológica particularmente débil y no
resuelto, a diferencia de otras áreas de la acción humana y la
formación de la sociedad. Evite el problema al no hablar de
ello. Afortunadamente, esto ha mejorado en los últimos dos o tres
años, lo que obviamente tiene que ver con la conmoción de los
casos de abuso.
4. Problemas de espiritualidad: si lo veo bien, el punto real en el
que sufrimos en la realidad eclesial actual es la credibilidad. Ha
habido una negación masiva de confianza desde afuera, donde a la
Iglesia le gusta ser un defensor moral, o se espera que juegue ese
papel, pero también desde adentro, donde muchos miembros de la
iglesia están indignados y han reducido sus expectativas a cero, o
incluso ante sospechas globales. , ciertamente a menudo
erróneamente. Existen los sacerdocios vividos, percibidos, pero
aún practicados en secreto, hay una gran cantidad de
homosexualidad hasta el centro, y al mismo tiempo hay muchas
preocupaciones sobre mejores soluciones para los divorciados que
vuelven a casarse y la participación de los cónyuges protestantes.
La Eucaristía. Es una cuestión de honestidad moral de la cultura
interna de la Iglesia, cómo tratamos las situaciones conflictivas,
pero también es una cuestión de nuestra propia espiritualidad. Y si
eso es así, es parte de esta honestidad de la cultura eclesial del
interior que los responsables reconocen los errores y la carga de
conciencia y defienden los errores de la iglesia. Tanto el Concilio
Vaticano II en varios documentos como Juan Pablo II con sus
peticiones de perdón en 2000 han tenido un comienzo alentador
aquí. que los responsables reconocen los errores y la carga de la
conciencia y soportan los errores de la iglesia. Tanto el Concilio
Vaticano II en varios documentos como Juan Pablo II con sus
peticiones de perdón en 2000 han tenido un comienzo alentador
aquí. que los responsables reconocen los errores y la carga de la
conciencia y soportan los errores de la iglesia. Tanto el Concilio
Vaticano II en varios documentos como Juan Pablo II con sus
peticiones de perdón en 2000 han tenido un comienzo alentador
aquí.
Entonces: "El" problema no existe, pero el "problema" es
multidimensional. Y, por lo tanto, no existen soluciones y
alternativas simples para la forma en que el discurso sexual y
ético de la iglesia pueda sanar lo más rápido posible, de manera
sostenible y con la mayor admiración posible del público. En este
contexto, me gustaría llamar especialmente la atención sobre dos
ilusiones, que también son muy comunes entre los acomodados, a
saber: es simplemente un problema de lenguaje, y los problemas
mencionados anteriormente son particularmente agudos entre los
niños y adolescentes. Para un problema de idioma es sinónimo,
pero solo: sinónimo. Eso es mucho más profundo. Y con los niños y
adolescentes, siempre noto que las conferencias sobre estos
temas en toda Alemania están realmente ocupadas hasta el último
asiento, pero que la gran mayoría de los visitantes pertenecen a
los mayores de 60 años. Y los pocos jóvenes, que están
interesados en la opinión de la iglesia sobre esta área y no ven los
problemas con ellos mismos y con sus compañeros, no quieren
discutir esto en público, sino en pequeños círculos cerrados donde
se animan mutuamente.
Entonces, si no se trata solo de la formulación correcta o un
problema que solo los jóvenes tienen en el camino del crecimiento,
¿cuál podría ser el objetivo de la renovación?

III.
Creo que haríamos bien en definir este objetivo a las intenciones
de la Constitución Pastoral Gaudium et SpesHace 50 años, el
Concilio Vaticano II hizo una redefinición programática de cuál es
el propósito y la misión de la iglesia entre la gente de hoy. En este
texto, primero encontramos un cambio de paradigma
metodológico, lo que implica que aunque la iglesia no es realmente
idéntica a la sociedad, sobre todo no es una entidad social
completamente independiente, autónoma y autosuficiente, sino
parte de la sociedad y la vida cultural. , Esto tiene una importancia
considerable porque la situación de la sociedad se describe como
un proceso profundo de cambio (artículos 5, 6 y 7). Con los topos
de los signos de los tiempos, que se aplican cuidadosamente para
registrarse y explorar, y que también debe interpretarse a la luz del
Evangelio (4), se proclama la obligación de percibir y tomar en
serio lo que sucede en la evolución de la sociedad; incluso si no
insistían en la tradición teológica, eran de relevancia teológica. En
los textos mismos se encuentran desde la encíclicaPacem en
terris, que utilizó estos topos por primera vez, dando una serie de
ejemplos de signos de los tiempos, como el reconocimiento de los
derechos fundamentales y humanos, la creciente conciencia de la
dignidad de uno, la fundación de la ONU y la Declaración de los
Derechos Humanos de 1948 y más. Desde la ética sexual, nada
está expresamente incluido. Pero no hay ningún punto o razón para
mantener los signos de los tiempos en los ejemplos mencionados
anteriormente, ni reconocer los desarrollos que han tenido lugar
después como un signo de los tiempos, como la búsqueda de una
mayor asociación entre los sexos, el esfuerzo dar derechos a los
niños independientemente de sus padres, luchar por la no
discriminación, mejorar la situación legal de las personas
divorciadas, buscar una mayor inclusión, etc.
Un segundo empujón de Gaudium et Speses la autocomprensión de
la relación del mundo vivido: la relación básica no es la de
determinar y la valoración moral de todo y cada uno desde la
posición superior del mejor conocimiento, sino la del
cuestionamiento y el aprendizaje. Por supuesto, esto es diferente
del mero desafío personal para adaptarse. Aprender: eso significa:
percibir, poder escuchar a los demás, significa tomarse la molestia
de apreciar las experiencias que otros han hecho en su entorno, en
su entorno, también en el curso de su biografía, también sus
experiencias con el Creer y usar la forma de vida elegida y tratar
de traducir las creencias en una vida moldeada. En términos de
ética sexual, esto también incluye la vida con el matrimonio y la
familia, pero también la situación de vida de las personas casadas
y divorciadas, vida en otras formas de relaciones, los movimientos
de búsqueda en relaciones que aún no son matrimonio. Por
supuesto, el objetivo no puede ser que todo se mezcle y se
explique igualmente bien, sino que ciertamente vea lo que se vive
en búsqueda, en serio, pero también en compromiso y valores,
incluso en las constelaciones. que, medidos por la norma, no
cumplen con las expectativas.
Y hay un tercer esfuerzo en Gaudium et Spes(Art. 47-52), el
matrimonio y la familia de manera diferente que antes, es decir,
más personal y menos legal. El matrimonio se entiende
principalmente como la cohabitación de dos personas,
interpretado con la ayuda de la categoría bíblica del pacto con
mucha carga teológica, y ya no principalmente como un contrato
en el que los derechos y deberes mutuos se definen
objetivamente. El amor se valora como una condición esencial y
como el contenido y el objetivo de la comunidad y el encuentro
sexual, que es intrínsecamente valioso y no solo un medio de
apoyo para producir hijos. Es cierto que el Vaticano II solo tuvo en
cuenta el matrimonio y la familia, y ni siquiera abordó las
relaciones no matrimoniales. Pero superó la visión naturalista y
funcionalista dominante durante siglos de la sexualidad en
principio. La discusión sobre la legitimidad de la anticoncepción,
que finalmente entra en la encíclicaHumanae Vitae culminó
en Familiaris Consortio y recibió un impulso, este punto de vista ha
cortado la punta o la ha dirigido en una dirección
diferente. Seguro! ¡Sin embargo, la demanda decisiva de la
personalidad como principio básico de la proclamación social de
la iglesia para la ética sexual no se ha revisado de ninguna
manera! Y es por eso que me parece perfectamente legítimo y
necesario romper la fijación de la discusión sexual-ética
sobre Humanae Vitae como una restricción, y que lo que se ha
desarrollado y es vivido, incluso por los católicos, no solo de
acuerdo con la cuadrícula "matrimonio o no matrimonio" pero en
vista de la meta, como en las diversas figuras relacionales y donde
sea que se viva la sexualidad, más El amor personal puede tener
lugar, es decir, concretamente: se puede lograr más respeto y más
atención plena, más veracidad, lealtad más fuerte, más
sensibilidad y consideración, más disposición para involucrarse en
la pareja.

IV.
Quiero decir, deberíamos ir allí; Estas son metas que, cincuenta
años después del Concilio Vaticano II, no deben olvidarse ni
retirarse, pero ciertamente deben exigirse. Y luego uno se queda
en un sólido suelo eclesiástico de integridad, compromiso
incondicional y fertilidad en lo nuevo como los valores cruciales
del matrimonio, incluso si a algunos representantes no les gusta y
algunos grupos incluso piensan que tienen el espectáculo,
simplemente negándolo a uno. No quiero lidiar con eso ahora, pero
eche un vistazo a cuál es el estado de los esfuerzos teológicos
morales para la ética sexual. Para esbozar esto, utilizo
nuevamente los puntos mencionados anteriormente como
perspectivas de cristalización, así que:
1. ¿Cuál es la teoría?El cambio más llamativo puede caracterizarse
por la palabra clave "ética de la relación". Significa que la
sexualidad entre las personas no se entiende principalmente como
un medio para un fin, ya sea la satisfacción de una necesidad
física o reproducción, sino como un tipo especial de comunicación
en la que los bienes personales, como el afecto, el reconocimiento,
Estima, pertenencia, cuidado, disposición a la solidaridad,
aceptación, consuelo. Y, mirando el interior de los sujetos que
actúan, significa que no se trata de definir los límites dentro de los
cuales se permite la satisfacción y más allá de los cuales está
prohibida, sino de la responsabilidad de las relaciones con las
personas, cuál se acerca emocional y físicamente y con quién
puede interactuar en muchos niveles. Es importante destacar que,
en las relaciones sexuales en el contexto de las relaciones, su
punto de vista como actos punto a punto no es acorde con el
hecho de que es la interacción de las personas que pueden
participar en un enfoque holístico y una gama mucho más amplia
de interacciones mutuas Tener que lidiar solo con actos
genitales. Por lo tanto, la ética sexual debe ser pensada y
moldeada por las relaciones y no al revés, es decir, de tal manera
que la sexualidad ya estandarizada sobre la base de
especificaciones naturales se tome como el marco desde el cual
las relaciones se juzgan como permitidas o no autorizadas. La
naturaleza objetiva y el significado subjetivamente posible de la
sexualidad entre los humanos se realiza y se despliega o se pierde
donde se ubica en el contexto de la dimensión de relación de la
existencia humana. Este cambio de perspectiva de la ética sexual
tradicional a la ética de las relaciones de ninguna manera niega la
necesidad de orientación de la sexualidad humana, sino que, por el
contrario, lo hace más exigente porque las relaciones son
moldeadas decisivamente por las personalidades de los socios y, a
su vez, reaccionan a ellas, pero al mismo tiempo deben ser
conscientes de qué es frágil, por lo que, además de las
oportunidades, también contiene riesgos específicos; como algo
que debe ser moldeado, estabilizado y promovido socialmente
precisamente por la diversidad de personas y la variedad de
niveles de encuentro; y finalmente algo lo que debe desarrollarse
primero y debe colocarse de forma permanente mediante una
interacción siempre repetida y para el crecimiento abierto contra
el flujo del tiempo. La confianza, la fiabilidad, la aceptación, la
responsabilidad, la lealtad son más importantes que el
conocimiento de normas de prohibición muy detalladas.
2. ¿Cuáles son los desarrollos sociales?El elemento más
sorprendente me parece ser la mayor sensibilidad a la
vulnerabilidad, que debe ser bien recibida en la ética sexual y
llevada a un desarrollo significativo. Esta atención a la
vulnerabilidad se aplica a todos, incluidos hombres y mujeres en
sus relaciones mutuas, pero especialmente en la relación de los
adultos con los niños y adolescentes y todos los demás
encargados o confiados. Después de todo, los adultos o
profesionales que trabajan como ayudantes son superiores, por un
lado, a través del avance de la confianza y, por otro lado, la
superioridad del conocimiento y la experiencia. Por el contrario,
los niños y adolescentes simplemente no han terminado, sino que
están orientados a su desarrollo. Esto está abierto al futuro, por lo
que es importante en su acompañamiento, para brindarles un
entorno estable y de apoyo, así como para proteger su apertura e
inexperiencia especiales de la explotación, la seducción y el
control externo. Debido a la vulnerabilidad particular de los niños y
adolescentes, no es suficiente para ellos hacer lo que a menudo se
dice que es la orientación ética última o incluso única para las
relaciones sexuales de adultos, es decir, el consentimiento
mutuo. Más bien, el respeto por el niño y su capacidad de
desarrollo y apertura al futuro requiere que su interés y opciones
para el futuro sean preservados y protegidos de ser abusados
sexualmente por otros que están muy cerca de ellos por razones
muy diferentes. ser instrumentalizado No se trata solo de una
mejor práctica y disciplina,
Por cierto, la visión más aguda de la vulnerabilidad no solo afecta
las condiciones para que los adultos acompañen a los niños y
adolescentes, sino que también se extiende al espacio interno de
las relaciones y el matrimonio. Porque incluso dentro de este
marco privilegiado basado en la confianza y un sentido de
pertenencia, se puede abusar de la cercanía y la vulnerabilidad, se
puede ejercer el dominio y se puede cruzar la frontera.
3. Si somos de la iglesiaPor un lado, debe tratarse de cuidar un
clima en el que se puedan aprender las lecciones, pero también se
brinde asesoramiento y se acepte el fracaso. Pero, por otro lado,
también debe tratarse de proteger a los encargados de ellos y
desarrollar estructuras éticas organizativas que tengan como
objetivo fortalecer las actitudes morales de los tratos conscientes
y participativos, pero al mismo tiempo respetuosos, con las
personas en la diversidad de sus situaciones en la vida. Además,
que existen reglas transparentes para lidiar con violaciones,
sospechas y necesidades. Y finalmente
4. La cuarta palabra clave, a saber, espiritualidad.Dos cosas me
parecen de suma importancia. Lo único está relacionado con el
tipo de discurso y argumentación sexual-ética. Si bien hasta el
momento prevaleció en el gesto de instruir e instruir y podría
surgir la impresión de que la ética sexual de la iglesia era una
estructura de enseñanza verdadera y en gran medida completa, la
enseñanza en el futuro debería diseñarse más como comunicar,
estimular y ayudar a convertirse en una persona. Lo que se quiere
decir sobre todo es que la enseñanza se lleva a cabo en un modo
de habla, que aborda las preguntas de las personas y estimula los
procesos de pensamiento, que involucra a los destinatarios con
sus experiencias y convicciones y como sujetos que luchan por
una vida auténtica de la fe, también en su búsqueda y su fracaso
se toman en serio y finalmente escuchando la voz de los heridos,
los abandonados, los maltratados y los humillados. Aliento y
aliento responsable en lugar de prohibir y quejarse. Sin embargo,
el objetivo de tal desarrollo comunicativo no puede ser una ética
sexual tan completa como sea posible o la fijación de reglas
concretas de conducta, sino que debe ser la provisión de ayuda y
criterios para la conciencia de los sujetos que toman sus propias
decisiones y la responsabilidad de Dios, frente a otros, antes de
ellos mismos (Geoffrey Robinson).
La otra preocupación está relacionada con la promoción del
desarrollo de la personalidad de aquellos que están en la
capacitación y preparación de una profesión dedicada a trabajar
con personas confiadas. Ya sea que luego quieran vivir en una
relación con un compañero de vida o renunciar al matrimonio,
deben someterse a un proceso de maduración
psicosexual. Cualquiera que haga que las relaciones funcionen
como el foco de su profesión debe tener una relación imparcial
con su sexualidad, desarrollarse de una manera específica,
conocerlas y darse cuenta de sí mismo como hombre o mujer. El
desarrollo psicosexual no solo afecta la integración de las
condiciones físicas y los desarrollos en la propia vida propia y la
relación de uno mismo, más bien, necesariamente tiene lugar en
un campo social de relación en el que la autoimagen respectiva
debe ser presentada, probada, relacionada, equilibrada, delimitada
y afirmada. Esta contextualidad social coloca a las personas que
están en una relación de apoyo, y también a aquellas que, a través
de ofertas de relaciones, otras personas que se les confían para un
propósito particular, fomentan y apoyan la tarea, la capacidad de
cercanía y distancia, y una distinción constante Ambos, y exigen la
capacidad de disfrutar de una cosa u otra y seguir siendo ellos
mismos. En otras palabras, tienen que ser auténticos, es decir, a
las diversas y no homogéneas expectativas que surgen a través de
modelos sociales, modas estéticas, presión de grupo y
otros. agredirlos, tener la voluntad y pretender ser congruentes
con sus propias opciones de valor y coherentes en su propia
identidad a medida que avanza el desarrollo biográfico. Esta
voluntad de autenticidad demuestra ser una condición necesaria
para una relación exitosa bajo las condiciones de una pluralidad
creciente de estilos de vida y cosmovisiones, así como un criterio
central de credibilidad personal y específica de roles. Eso también
tiene que ser un tema de ética sexual católica renovada. Esta
voluntad de autenticidad demuestra ser una condición necesaria
para una relación exitosa bajo las condiciones de una pluralidad
creciente de estilos de vida y cosmovisiones, así como un criterio
central de credibilidad personal y específica de roles. Eso también
tiene que ser un tema de ética sexual católica renovada. Esta
voluntad de autenticidad demuestra ser una condición necesaria
para una relación exitosa bajo las condiciones de una pluralidad
creciente de estilos de vida y cosmovisiones, así como un criterio
central de credibilidad personal y específica de roles. Eso también
tiene que ser un tema de ética sexual católica renovada.
Personalmente, creo que ganar autenticidad es también el punto
de partida para abordar y superar la dolorosa discrepancia entre
las demandas oficiales y las convicciones internas vividas de la
mayoría de los fieles, incluidos aquellos que simpatizan con la
Iglesia en general y el ministerio. , Autenticidad en lugar de mera
adhesión a las idealizaciones y normas de la tradición, cuyo
significado y justificación casi nadie puede comprender. Aunque
los ideales pueden ser objetivos y pautas valiosas, ya que nos
ayudan a pasar de pequeños pasos a una meta, a pesar de todas
las dificultades y nos motivan a seguir y no rendirnos. Pero tienes
que ver que los ideales también pueden ser peligrosos, cuando
pretenden ser armoniosos, donde, en realidad, están por encima de
todos los problemas, y sobre todo, cuando sobrecargan de manera
constante y considerable los poderes de las personas a las que se
supone que deben ayudar a que su estilo de vida sea exitoso, o no
cumplen con su realidad de la vida. Tal mantenimiento proforma de
ideales contra las realidades se paga mediante la reducción de la
relevancia de las directrices eclesiásticas para la orientación y la
búsqueda de respuestas a las propias necesidades y problemas
(como se demuestra en muchos estudios empíricos) y, por lo tanto,
no es en absoluto inofensivo. Debido a que deja a las personas con
influencias, prácticas y escenas que establecen estándares de una
manera nueva, hacen que la sexualidad esté comercialmente
disponible y permanentemente disponible, y reifica a las personas
que buscan proximidad. y, sobre todo, si sobrecargan
constantemente y considerablemente los poderes de las personas,
a quienes se supone que deben ayudar para que su estilo de vida
tenga éxito, o si ni siquiera cumplen con su realidad de la vida. Tal
mantenimiento proforma de ideales contra las realidades se paga
mediante la reducción de la relevancia de las directrices
eclesiásticas para la orientación y la búsqueda de respuestas a
las propias necesidades y problemas (como se demuestra en
muchos estudios empíricos) y, por lo tanto, no es en absoluto
inofensivo. Debido a que deja a las personas con influencias,
prácticas y escenas que establecen estándares de una manera
nueva, hacen que la sexualidad esté comercialmente disponible y
permanentemente disponible, y reifica a las personas que buscan
proximidad. y, sobre todo, si sobrecargan constantemente y
considerablemente los poderes de las personas, a quienes se
supone que deben ayudar para que su estilo de vida tenga éxito, o
si ni siquiera cumplen con su realidad de la vida. Tal
mantenimiento proforma de ideales contra las realidades se paga
mediante la reducción de la relevancia de las directrices
eclesiásticas para la orientación y la búsqueda de respuestas a
las propias necesidades y problemas (como se demuestra en
muchos estudios empíricos) y, por lo tanto, no es en absoluto
inofensivo. Debido a que deja a las personas con influencias,
prácticas y escenas que establecen estándares de una manera
nueva, hacen que la sexualidad esté comercialmente disponible y
permanentemente disponible, y reifica a las personas que buscan
proximidad. Constantemente y considerablemente sobrecargado o
nada de la realidad viviente. Tal mantenimiento proforma de
ideales contra las realidades se paga mediante la reducción de la
relevancia de las directrices eclesiásticas para la orientación y la
búsqueda de respuestas a las propias necesidades y problemas
(como se demuestra en muchos estudios empíricos) y, por lo tanto,
no es en absoluto inofensivo. Debido a que deja a las personas con
influencias, prácticas y escenas que establecen estándares de una
manera nueva, hacen que la sexualidad esté comercialmente
disponible y permanentemente disponible, y reifica a las personas
que buscan proximidad. Constantemente y considerablemente
sobrecargado o nada de la realidad viviente. Tal mantenimiento
proforma de ideales contra las realidades se paga mediante la
reducción de la relevancia de las directrices eclesiásticas para la
orientación y la búsqueda de respuestas a las propias necesidades
y problemas (como se demuestra en muchos estudios empíricos) y,
por lo tanto, no es en absoluto inofensivo. Debido a que deja a las
personas con influencias, prácticas y escenas que establecen
estándares de una manera nueva, hacen que la sexualidad esté
comercialmente disponible y permanentemente disponible, y
reifica a las personas que buscan proximidad. Tal mantenimiento
proforma de ideales contra las realidades se paga mediante la
reducción de la relevancia de las directrices eclesiásticas para la
orientación y la búsqueda de respuestas a las propias necesidades
y problemas (como se demuestra en muchos estudios empíricos) y,
por lo tanto, no es en absoluto inofensivo. Debido a que deja a las
personas con influencias, prácticas y escenas que establecen
estándares de una manera nueva, hacen que la sexualidad esté
comercialmente disponible y permanentemente disponible, y
reifica a las personas que buscan proximidad. Tal mantenimiento
proforma de ideales contra las realidades se paga mediante la
reducción de la relevancia de las directrices eclesiásticas para la
orientación y la búsqueda de respuestas a las propias necesidades
y problemas (como se demuestra en muchos estudios empíricos) y,
por lo tanto, no es en absoluto inofensivo. Debido a que deja a las
personas con influencias, prácticas y escenas que establecen
estándares de una manera nueva, hacen que la sexualidad esté
comercialmente disponible y permanentemente disponible, y
reifica a las personas que buscan proximidad.

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