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Tener un valor inferior al 0.95 significa que se está utilizando energía, pero no toda se está
convirtiendo en un trabajo útil.
Un alto factor de potencia permite una eficiente utilización de la energía, mientras que
uno bajo indica una pobre utilización de la energía eléctrica.
La mayoría de las cargas modernas son inductivas, entre ellas están: los motores,
transformadores, tubos gaseosos, balastros de iluminación y hornos de inducción. La
potencia de trabajo (kW) más la potencia reactiva (kVAR) es igual a la potencia Aparente
(kVA), kVA=kW+kVAR
Dependiendo de la demanda máxima las compañías eléctricas dejan exento de pago los
valores de 0.9 ó 0.95 .
Generalmente las multas son altas por lo que es importante corregir la causa y evitar pagar
las multas.
Las soluciones son fáciles de instalar, tienen un periodo de recuperación de la inversión corto
y se pueden instalar rápidamente.
Se aplica, directamente a todos los servicios que sean de gran demanda, normalmente son
mensuales, es decir, aplica directamente a la industria.
Las tarifas eléctricas en las que puede observarse este concepto en el recibo de luz son HM
(Tarifa horaria para servicio general en media tensión), OM (Tarifa ordinaria para servicio
general en media tensión), actualmente GDMTH (Gran demanda en media tensión horaria )
y GDMTO (Gran demanda en media tensión ordinaria.), respectivamente.
Todos los equipos que operen con devanados tales como: Motores, Bombas, Aire
Acondicionado, etc.
Son conocidos como cargas inductivas ya que por su naturaleza demandan una cantidad de
energía la cual no toda se traduce en trabajo aprovechable. Sin embargo, es requerida para
lograr que el equipo/motor trabaje en óptimas condiciones.
Este bajo Factor de Potencia, puede y debe corregirse a fin de evitar la penalización calculada
mediante una fórmula publicada por la Comisión Federal de Electricidad.
Esto se traduce en importe a pagar dependiendo el valor que se tenga de acuerdo a la medición
obtenida.
En toda instalación eléctrica, este valor es observable, más sin embargo no en todas se
factura, y aunque no se facture, optimizar este valor, es importante para evitar «desperdiciar»
energía eléctrica.
Para corregir el Factor de Potencia, es necesario llevar a cabo un diagnóstico energético para
detectar qué equipo/s propician este comportamiento.
Es indispensable determinar si un banco de capacitores debe instalarse para corregir el valor
que actualmente se factura, es indispensable también saber de qué forma y horarios operan
las cargas en cuestión.
En general, este concepto se puede aplicar en todas las instalaciones, siempre y cuando se
desee ahorrar energía y lograr que una instalación eléctrica sea eficiente.