Bizcocho de sémola y agua de rosas

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Bizcocho de sémola sobre stand blanco

Este bizcocho de sémola y agua de rosas tiene unos sabores orientales y deliciosos. La
combinación del agua de rosas con los pistachos es un clásico de las cocinas del Oriente
Medio y de la India que hoy os traemos en este bizcocho tan rico y tan sencillo. El agua de
rosas es un sabor con el que hay que ser cautos, al igual que con el agua de azahar, a la que
estamos acostumbrados aquí, pero que bien usado resulta delicioso.

La receta, inspirada en la de este blog, es una masa con levadura química y con la
mantequilla montada con el azúcar, para lo que es imprescindible usar un robot o una
batidora de varillas. Además de acompañar el bizcocho de pistachos los añadimos
picaditos a la masa y, para redondear la faena, podemos preparar nuestros propios
pétalos de rosa cristalizados, de los que os damos también la receta.

Además, el bizcocho lleva un ingrediente muy habitual igualmente en la cocina oriental, la

sémola de trigo, que le da muchísima jugosidad. Lo hemos preparado con un comodísimo
molde pushpan pequeño de 15 cm, pero tienes varios tamaños en nuestra tienda. Hacer
bizcochos con estos moldes PushPan es un paseo.

Receta de bizcocho de sémola

Ingredientes (para molde de 15 cm):

Bizcocho

125 g de mantequilla ablandada

125 g de azúcar
Dos huevos L a tª. ambiente
Una cdta. de agua de rosas
110 g de sémola de trigo
225 g de harina de repostería
5 g de levadura química
Un puñadito de pistachos picados
120 ml de leche
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 Pistachos enteros para adornar

Pétalos de rosa cristalizados

Pétalos de una rosa (no tratada con insecticidas)

Un poco de azúcar
Una clara de huevo

Elaboración:
Bizcocho

Calentamos el horno a 180ºC. Engrasamos el molde pushpan con spray antiadherente o

con mantequilla y harina. Reservamos.
Ponemos la mantequilla ablandada en un bol, agregamos el azúcar y montamos en un
robot o con varillas eléctricas a alta velocidad hasta que esponje y blanquee.

Agregamos los huevos de uno en uno hasta integrarlos, rebañando las paredes con
espátula. Añadimos el agua de rosas.

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En un bol sobre la báscula pesamos la harina de repostería y la tamizamos junto con la
levadura química. Añadimos la sémola y mezclamos con varillas.

Agregamos los sólidos y la leche a la mezcla de mantequilla y azúcar en un par de

tandas alternadamente. Vertemos la mezcla en el molde preparado, alisamos la
superficie con la espátula y cocemos en el horno de 40 a 45 minutos, o hasta que al
insertar una brocheta en el centro salga limpia.

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Sacamos el molde del horno y dejamos templar 10 minutos. Desmoldamos empujando
el fondo del molde pushpan hacia arriba y pasamos el bizcocho a una rejilla. Dejamos
enfriar por completo.

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Pétalos de rosa cristalizados

Separamos los pétalos de una rosa, desechando los que estén más feos o sean
demasiado pequeños. Separamos la clara de huevo y le añadimos un pellizco de sal.
Dejamos reposar 10 minutos a temperatura ambiente para que se fluidifique.
Preparamos un plato con azúcar y pintamos los pétalos, de uno en uno, con clara de
huevo por las dos caras. Los rebozamos en el azúcar y los vamos poniendo en una
bandeja o rejilla. Secamos al horno a 30-35°C (o con deshidratador va fenomenal)
hasta que estén tiesos. Mantienen todo su aroma.

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Bizcocho de sémola sobre plato de GreenGate

Este bizcocho de sémola con agua de rosas es superjugoso, aunque parezca compacto, y se
lo debe a la sémola, precisamente. El sabor a agua de rosas no es excesivo y se come sin
sentir… Y ¿a qué queda bonitísimo con sus pistachos y sus pétalos de rosa?

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