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ANTONIO ATIAS

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MEDITERRANEO
PROLOGO'

Los parásitos constituyen una de las mayores causas productoras de infecciones que afectan al hombre
y a los animales. Sus efectos no sólo provocan elevados índices de morbilidad y mortalidad, sino que
conllevan a la producción de cuantiosas pérdidas económicas que no sólo comprometen al hombre enfermo,
sino también a su entorno familiar y a la comunidad en la cual está inserto. En algunos casos, llega a limitar
el desarrollo social y económico, como suele ocurrir en muchos países en desarrollo.
En las últimas décadas, ha sido impresionante el avance conseguido en el conocimiento de la relación
huésped-parásito que está basada, por una parte, en la potencialidad patógena del parásito y en su capacidad
de adaptación y evasión de la respuesta inmune, y por otra, en la mejor comprensión de las complejas etapas
para montar una eficiente defensa inmunitaria del hospedero frente a la invasión parasitmia y cuyo fin es
tenninar ya sea con la eliminación del parásito (que sólo se logra en contadas ocasiones) o alcanzar un
· equilibrio de convivencia. Sin embargo si se logra este equilibrio eminentemente inestable, puede en algún
momento llegar a romperse debido a factores dependientes del parásito o del hospedero, transfonnando la
infección parasitaria (que ºno tiene porqué ser necesariamente sintomática), en una verdadera enfem1edad
·parasitaria.
De esta manera, según las características de la relación huésped-parásito, se configuran diversos esce­
narios clínicos que pueden favorecer a uno u otro protagonista de la infección parasitaria, lo cual dificulta
esbozar perfiles sintomatológicos que abarquen todos los encuentros entre hospedero y parásitos. Su varia­
ción extrema es la aparición de cuadros clínicos derivados de la depresión o supresión inmunitaria del
hospedero y la emergencia de parásitos oportunistas, como ocrnTe en el SIDA.
El tercer protagonista de la infección parasitaria (y con connotaciones tan trascendentes como son el
parásito y el huésped), es el ambiente exterior. Las condiciones ecológicas propicias del ambiente para el
encuentro de parásitos y hospederos, está demarcado especialmente por factores climáticos, del saneamiento
básico y de factores socioeconómicos y culturales,
Tal como fuera relevante en las tres ediciones de la "Parasitología Clínica" que publicáramos con el
Profesor Amador Neghme, en cada capítulo de este libro está inse1io el protagonismo parásito-hospederÓ­
ambiente y su relevancia para la producción de la infección y la enfennedad parasitaria. Hemos tratado de
poner más énfasis en el hombre enfenno que en el parásito mismo, del cual se abordan sus rasgos morfológicos
y biológicos de mayor relieve; en cambio, se describen con más detalle, sus acciones patogénicas y clínicas
y su impacto en salud pública.
Quisiéramos agradecer a los distinguidos colaboradores de este libro, justamente escogidos por su
conocimiento y autoridad en cada capítulo. Rasgo común en muchas de las colaboraciones nacionales, es
el lenguaje y estilo en que están expuestas las materias, como si hubieran sido escritas por una sola mano.
Esto no es más que el trasunto de la pertenencia a la Escuela Parasitológica Chilena fundada y cimentada
por el Profesor Neghme, del cual todos directa o indirectamente, nos sentimos sus discípulos.
Vaya, además, mi reconocimiento a los miembros del Departamento de Parasitología de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Chile, entre ellos a Alejandro García por la confección de varias figuras
originales, a David Garrido por sus acertadas fotografías, y a mi prolija y paciente secretaria, Patricia
Sanhueza.
Del mismo modo, quisiera reconocer la labor de Editorial Mediten·áneo, especialmente a su Presidente,
Ramón Alvarez Minder, gran impulsor de la difusión de la literatura médica en América Latina, y a Ana
Cecilia Saavedra, por su invaluable colaboración.
Estaremos muy satisfechos si logramos alcanzar nuestro más preciado objetivo: que este libro constituya
un texto guía para los estudiantes de medicina y carreras afines, así como una obra actualizada de la
especialidad, útil para todos los médicos de América Latina.

A111011io Alías Mar/in


COLABORADORES

Moisés Agosín, Médico Alejandro García, Tecnólogo Médico


Profesor Investigador. Department of Zoology. Docente de Parasitología, Facultad de Medicina,
University of Georgia, Athens, Universidad de Chile.
Georgia, USA.
Texia Gorman, Médico Veterinario
Francisco Aguilar, Médico Profesor Titular de Parasitología, Facultad de
Profesor Titular de Parasitología. Ex Catedrático y Ciencias Veterinarias y Pecuarias,
i Medalla Universitaria Universidad de San Carlos, Universidad de Chile.
i
1
Guatemala.
Beatriz Gottlieb, Médico
Héctor Alcaíno, Médico-Veterinario Ph. D. Profesor Asistente de Parasitología, Facultad de
Profesor Titular de Parasitología, Facultad de Medicina, Universidad de Chile.
Ciencias Veterinarias y Pecuarias,
Universidad de Chile. Pedro Herskovic, Médico
Profesor Asistente, Departamento de Pediatría,
Arturo Arribada, Médico · Hospital Luis Calvo Mackenna,
Profesor Titular de Medicina, Facultad de Medici­ Santiago de Chile.
na, Universidad de Chile.
Nafta/e Katz, Médico
..¡ Jefe del Laboratorio de Esquistosomosis,
1
María Inés Bahamonde, Médico
Docente de Parasitología, Facultad de Medicina, Centro de Pesquisas René Rachou,
U�versidad de Chile Belo Horizonte, Minas Gerais, Brasil.

Ornar O. Barriga, Médico Veterinario Ph. D. Myriam Larca, Tecnólogo Médico Ms. Se.
Profesor de Inmunoparasitología, School of Profesor Asociado de Parasitología, Facultad de
Veterinary Medicine, University of Medicina, Universidad de Chile.
Columbia, Ohio, USA. Alejandro Llanos, Médico Ms. Se.
Rodolfo Céspedes ( = ), Médico Profesor Asociado, Departamento de Medicina y
Ex Profesor y Ex Director del Departamento de Salud Pública, Universidad Peruana Cayetano
Anatomía Patológica, Heredia, Perú.
Universidad de Costa Rica.
Rubén Mercado, Tecnólogo Médico Ms. Se.
María del Carmen Contreras, Profesor Asistente, Facultad de Medicina,
Químico Farmacéutico Universidad de Chile.
Profesor Asistente de Parasitqlogía, Facultad de
Medicina, Universidad de Chile. Antonio More/lo, Bioquímico Ph. D.
Profesor Titular de Bioquímica, Facultad de
Marisol Denegri, Médico Medicina, Universidad de Chile.
Docente de Parasitología, Facultad de Medicina,
Universidad de Chile. Hospital Félix Bulnes, Pedro Morera, Ph. D.
Santiago de Chile. Profesor Titular de Parasitología, Universidad de
Costa Rica.
Gustavo Díaz-Pérez, Médico
Profesor Titular de Neurología, Facultad de Patricia Muñoz Casas del Valle, Médico, Ms. Se.
Medicina, Universidad de Chile, Vicedecano. Profesora de Parasitología y
Profesor Asociado de Neurocirugía, Instituto de Profesora de Pediatría, Facultad de Medicina,
Neurocirugía, Santiago de Chile. Universidad de los Andes, :;lantiago de Chile.
Víctor Muñoz, Tecnólogo Médico Jorge Sapunar, Médico
Profesor Asistente de Parasitología, Facultad de Profesor Asociado de Parasitología, Facultad de INDICE DE CAPITULOS
Medicina, Universidad de Chile. Medicina, Universidad de Chile.

César Náquira, Médico, Ph. D. Roberto Sena Rocha, Médico


Profesor Principal de Parasitología, Facultad de Laboratorio de Esquistosomosis. Centro de PRIMERA PARTE
Medicina, Universidad Nacional Mayor de San
Marcos, Perú.
Pesquisas René Rachou, Belo Horizonte,
Minas ·oerais, Brasil. Parasitología básica
Isabel Noemí, Médico, Ms. Se. Renzo Tassara, Médico Ms. Se.
Profesor Asociado de Parasitolgía, Facultad de Profesor Asistente de Parasitología,
Medicina, Universidad de Chile. Hospital Luis Facultad de Medicina,
Universidad de Chile.
1 El parásito. Antonio Atías 21
Calvo Mackenna, Santiago de Chile.

Smíl Pasmanik, Médico Marisa Torres, Médico 2 Bioquímica y biología molecular de parásitos. 39
Profesor Asistente de Oftalmología, Facultad de Profesor de Parasitología, Pontificia Universidad Antonio More/lo, Moisés Agosín y Yolanda Repetto
Medicina, Universidad de Chile. Católica, Santiago de Chile.
3 El hospedador. La relación hospedero-parásito. Antonio Atías 49
Yolanda Repetto, Tecnólogo Médico Ms. Se. Erica Thiermann, Investigador
Profesor Asociado de Bioquímica, Facultad de Profesor Asociado de Parasitología, Facultad de 4 Patología general de las parasitosis. Roda/fo Céspedes 54
Medicina, Universidad de Chile. Medicina, Universidad de.Chile.

Viviana Reyes, Médico Pairfcio Torres, Tecnólogo Médico Ph.D.


5 Inmunología de las infecciones parasitarias. Omar O. Barriga 66
Hospital San Juan de Dios, Santiago de Chile. Profesor Asociado, Instituto de Parasitología,
Universidad Austral de Chile. 6 Epidemiología y control de las parasitosis. Marisa Torres y Patricia Muiioz C. del V. 102
Eisa /fogiero, Médico
Profesor Asistente de Parasitología, Facultad de Alejandro Viovy, Médico
Ciencias Médicas, Universidad de Santiago, Hospital Luis Calvo Mackenna,
Santiago de Chile. Santiago de Chile.
SEGUNDA PARTE
· Tirza Saavedra, Médico Juan Carlos Weitz, Médico
Profesor Asistente de Parasitología, Facultad de Departamento de Medicina, Hospital San Juan de Parasitología clínica
Medicina, Universidad de Chile. Dios, Santiago de Chile. Enteroparasitosis

7 Características generales de las enteroparasitosis. Antonio Atías 111

8 Amibiasjs. Viviana Reyes 119

.:�) Balantidiosis. César Náquira 129

1O Giardiasis. Isabel Noemí y A111011io Atías 134

·J11 Isosporosis. Juan Carlos Weitz 142

12 Criptosporidiosis. Juan Carlos Weitz y Renzo Tassara 146

13 Ciclosporosis. Antonio Alias 152

14 Sarcocistosis. Alejandro Viovy 156

15
'I Blastocistosis. Marisol Denegrí 161

16 Ascariasis. Renzo Tassara 164

'._I
PA-RASITOLOGIA MEDICA PARASITOLOGIA MEDICA 15

17 Tricocefalosis. Antonio Atías 172 �· 40 Cisticercosis. Antonio Atías 355

18 Anquilostomosis. César Náquira 178 � 41 Esquistosomosis. Nafta/e Katz y Roberto Sena Rocha 359
---------------------------
19 Estrongiloidosis. Antonio Atías 183 42 Paragonimosis. César Náquira 371

20 Enterobiosis. Antonio Atías 188 43 Fasciolosis. Antonio Atías 375

21 Teniasis. Eisa Rugiera e Isabel Noemí 194 44 Otras parasitosis de los tejidos. Antonio Atías 383

, 22') Difilobotriosis. Patricio Torres 201

23 Himenolepiosis y dipilidiosis. Ma. Inés Bahamonde 212 TERCERA PARTE


24 Otros parásitos y comensales del tubo digestivo. Antonio Atías 217
Parasitología topográfica

45 Parasitosis del sistema nervioso central. Gustavo Díaz-Pérez 393


Histo y hemoparasitosis 46 Parasitosis oculares. Saúl Pasmanik 407

25 Características generales de las histoparasitosis y hemoparasitosis. Antonio Atías 223 47 Parasitosis del corazón. Arturo Arribada 415

26 'Malaria o paludismo. César Náq11ira 227 48 Parasitosis del pulmón. Jorge Sapunar 426

27 Leishrnaniosis. Alejandro Lla11os y César Náq11ira 242 49 Parasitosis del hígado. A11tonio Atías 435

28 Enfermedad de Chagas. Antonio Atías 251

29 Toxoplasmosis. Antonio Atías y Erica Thiermann 265 CUARTA PARTE


30 Neumocistosis. Renzo Tassara y Juan Carlos Weitz
Artrópodos de interés médico
280 • -·,,

- 31 J:v:Iicrosporidiosis. A11to11io Atías y Juan Carlos Weitz 286 1· 50 Características generales de los artrópodos. Antonio Atías 445

32 Tricomonosis. Viviana Reyes 295 51 Dípteros: mosquitos, tábanos y moscas. Antonio Atías 450

33 Amibas de vida libre potencialmente patógenas. Beatriz Gottlieb 302 52 Piojos y pulgas. Marisa Torres y Antonio Atías 465

34 Filariosis. César Náquira 306 53 Triatomas, chinches.y cucarachas. Antonio Atías 476
--·
35 Oncocercosis. Francisco Aguilar 312 54 Sama y otras acarosis. Tirza Saavedra 484

-36 Triquinosis. Anto11io Atías 318 55 Garrapatas. Héctor Alcaíno 490

37 Angistrongilosis abdominal. Pedro Morera ,,,• 325 56 Arañas y otros artrópodos ponzoñosos. Isabel Noemí y Alejandro Viovy 496
-· 38 Larvas migrantes. Isabel Noemí y Eisa Rugiera 332

39 Hidatidosis. Jorge Sapu11ar 338


16. PARASITOLOGIA MEDICA

QUINTA PARTE
Parasitología aplicada
57 Transmisión congénita de parásitos. Pa1ricia Muiioz C. del r-:: 509

58 Nutrición y parasitosis. Pedro Herskovic 523

59 Inmunosupresión y parasitosis. Juan Carlos Weilz y Anlonio Atías 526


¡.
60 Síndrome infeccioso y parasitosis. Anlonio Alías 531

61 Anemia y parasitosis. Antonio Alías 536

62 Eosinofilia y parasitosis. Isabel Noemí y Anlo11io Alías 541

63 Enfennedades parasitarias transmitidas por el perro y el gato al hombre.


Héctor Alcaí110 y Texia Gor111a11
547 LAMINAS A COLOR

SEXTA PARTE
Diagnóstico de laboratorio
64 Métodos de diagnóstico directo. 561
Rubén Mercado, Víctor Mwioz, A{vriam Larca, Alejandro García

65 Métodos de diagnóstico indirecto. /i,,fyria111 Larca, lvfo. del Carmen Contreras 571

SEPTIMA PARTE
Tratamiento
66 Tratamiento de las parasitosis y tablas terapéuticas. A111onio Atías 579

GLOSARIO 601

INDICE DE MATERIAS 609

·.I
LÁMINA 1. Quiste de E111amoeba histolytica ( 100 x). LAMINA 2. Trofozoitos de Giardia duodena/is.

LAMINA 3. Quistes de Giardia duodena/is (IOO x). LÁMINA 4. Ooquistes de Jsospora be/li:
1 esporoquiste ( 100 x).

LÁMINA.5. Ooquistes de Jsospora belli: LÁMINA 6. Ooquistes de C1yprosporidiu111 pan•wn:


2 esporoquistes (i 00 x). infección masiva en un niño con sarampión
(Ziehl-Neelsen).

¡·
LAMINA 7. Ooquistes de Cryptosporidium parvum: LÁMINA 8. Ooquiste de Cyclospora cayetanensis (8 µm) LÁMINA 15. Escólex de Taenia solium. LAMINA 16. Huevo de Taenia sp (40x).
tinción fluorescente (aureamina) (100x). (100x).

LÁMINA 9. Forma LÁMINA 1o. Huevo de LAMINA 11. Obstrucción intestinal por Ascaris LAMINA 17. Acto quirúrgico en un caso de LÁMINA 18. Huevo de LAMINA 19. Huevo de
vacuolada de Blastocystis Ascaris /umbricoides /umbricoides en un niño de 3 años. cisticercosis ocular. Diphy/lobot/irium latllm Hymenolepis nana (40x).
hominis (100x). (40x). (40x).

LÁMINA 12. Huevo de LAMINA 13. Emerobius LÁMINA j'4; Huevos de Enterobius ·vefmiculb,-i:t.Cf
Tric/111ris trichiura vermicu/aris, extremidad (método ele Graham) (40x). LAMINA 20. Leishmaniosis: aspectos de leishmaniosis b) cutáneo-mucosa
(40x). anterior. a) cutánea;

:l

l
l.

+
l
LÁMINA 32. Quiste hidatídico de ovario con útero atrófico LAMINA 33. Cortes de múltiples hidátides en epiplón '1
por compresión (Dr. Carlos Moyano, Chile). mayor en un caso de hidatidosis secundaria
(Dr. Carlos Moyana, Chile).
i PARASITOLOGIA MEDICA
l
1

LÁl',jlNA 34. Huevo de Fasciola hepatica (40 x). LAMINA 35. Sama: lesiones en las manos.

LAMINA 36. Loxocelismo cutáneo. LAMINA 37. Loxocelismo cutáneo-visceral,


forma edematosa.
PRIMERA PARTE
Parasitología básica

j
1
J

Capítulo 1

EL PARASITO
ANTONIO ATIAS

En un ideal sentido de lo nonnal el hombre de­ a mediados del siglo pasado, propuso el nombre de
biera vivir en un estado de salud pennanente. Sin protistas para aquellos que nt;J-pueden ser nominados
embargo, si se recuerda la definición· de la OMS, integralmente como animales o vegetales. La mayo­
según la cual salud es el estado de bienestar físico, ría de los parásitos son microscópicos, mientras otros
psíquico y social completo, es casi una utopía que son visibles a simple vista y pueden medir centíme­
este ideal sea alcanzado en su integridad. El hombre tros o metros.
puede enfennar por múltiples causas exteriores o Los parásitos están constituidos o por agrupacio­
provenientes del propio individuo. Entre las causas nes moleculares (virus), o por una sola célula (bac­
externas o exógenas de enfennedades se·distinguen terias, hongos, rickettsias, protozoos), o ·por millo­
agentes fisicos ( calor, electricidad, presión atmosfé­ nes de células agrupadas en órganos y sistemas (hel­
rica, radiaciones, etc.), químicos (tóxicos, ácidos, mintos, artrópodos). Para facilitar la sistematización
cáusticos, etc.), nutricionales (dietas carenciales), bio­ del conocimiento y la investigación científica, el
lógicos (entes vivos capaces de producir daño), y estudio de los agentes biológicos se ha separado en
ecológicos ( contaminación ambiental, radiaciones varias disciplinas: la bacteriología, que se ocupa prin­
nucleares, factores psicosociales). cipalmente de las bacterias, rickettsias y espiroque­
En un sentido amplio, los agentes biológicos re­ tas; la micología, de los hongos; la virología, de los
ciben el nombre de parásitos y el ser vivo en el virus, y la'parasitología, que trata de los protozoarios
cual se instalan, se denomina hospedero, huésped y los parásitos metazoarios (helmintos y artrópodos)
o mesonero. Los parásitos pertenecen a los reinos (Tabla 1-1 ).
vegetal y animal, pero algunos de ellos participan Una de las características primordiales de los
de las cualidades de uno y otro, por lo cual Haeckel, seres vivos es conseguir el intercambio energétiéo

TABLA 1-1
CAMPOS DE LA PARASITOLOGIA

Parásitos Disciplina

Helmintos

¡ ¡
Artrópodos
Protozoos
} ''"''"'º'''
Superiores Hongos Micología

Reino Protista

}
Bacterias
_Micoplasmas
Bacteriología
., Inferiores Rickettsias
Chlamydias

Virus Virología
22 .. PARASITOLOGIA MEDICA ELPARASITO 23

con el ambiente que los rodea, actividad que es fun­ lófagos del intestino de las termitas. sentan un estado rudimentario de los sistemas diges­ único, aunque puede ser doble y ambos iguales, como
damental para satisfacer sus necesidades vitales. En Comensa/ismo. Asociación en la cual uno solo tivo, excretor o nervioso; los nematodos carecen de en el trofozoíto de Giardia duodena/is, o doble y
el fondo, se trata de la lucha permanente por la de los socios se beneficia y recibe el nombre de sistema circulatorio y los cestodos, además, no han desiguales (macronúcleo y micronúcleo), como en
obtención de alimentos para conservarse como in­ comensal. En este caso, el hospedero no sufre daño, desarrollado aparato digestivo. En cambio, nacen el Balantidium coli; puede también la célula presen­
dividuos y perpetuarse como especie. como por ejemplo, la presencia de Entamoeba coli órganos adhesivos poderosos, como garras, vento­ tar cuatro núcleos como en los quistes de Entamoe­
En los animales, los mecanismos para la obten­ en el intestino del hombre. sas, espinas y ganchitos que sirven para adherirse al ba histolytica y de Giardia lamblia, u ocho como
ción de alimentos han hecho que se desarrollaran el Parasitismo. Asociación en la cual uno solo de hospedero; pero lo más llamativo es el enorme de­ en los quistes de Entamoeba coli. El núcleo está
hábito predatorio y el hábito parasitario. El los socios, el parásito, se beneficia y el otro, el hos­ sarrollo alcanzado por la función reproductiva, adap­ envuelto por una membrana nuclear y en su interior
predador se alimenta de otro ser vivo, la presa, pedero, puede sufrir daño. Por consiguiente, los tación útil por la escasa probabilidad que tiene un se encuentran nucléolos, cariosomas o centríolos,
habitualmente cazada por él mismo y a la cual even­ parásitos pueden ser patógenos. huevo de llegar a desarrollar un individuo adulto. los que están constituidos por ácido ribonucleico
tualmente, mata. El parásito vive en asociación bio­ La línea demarcatoria entre comensalismo y pa­ Los cestodos son muy prolíficos, ya que cada pro­ (nucléolo) y ácido desoxirribonucleico (cromosomas).
lógica con otro ser vivo, el hospedero, obteniendo rasitismo no es rígida. Muchas veces, los parásitos glótida madura de las lombrices solitarias contiene El citoplasma puede presentar una parte externa
de él su alimento y al cual habitualmente no mata. viven como comensales en el hospedero y sólo en miles de huevos; los áscaris ponen unos doscientos hialina, el ectoplasma, que limitada por la membrana
La diferencia entre predador y parásito es clara en determinadas ocasiones producen daño. mil huevos diarios y otros nematodos de menor ta­ celular, pennite el intercambio metabólico con el medio
los extremos. Por lo general, el predador es más De acuerdo con estas premisas, se puede concluir maño, ponen unos diez mil huevos por dia. ambiente, y una parte interna, más densa y granulosa,
grande y poderoso que la presa; en cambio, el pará­ definiendo el parasitismo como un estado de asocia­ el endoplasma. Los protozoos presentan organelos o
sito es más pequeño y débil que su hospedero. ción biológica entre dos especies vivas diferentes, y porciones especializadas para cumplir determinadas
La vida animal no se comprende sin el hábito el parásito com.o el ser vivo que, de manera temporal PROTOZOOS funciones vegetativas, tales como locomoción, di­
predatorio, porque la mayoría de los animales de o permanente, vive a expensas de otro organismo de gestión, excreción, etc., para lo cual han desarrollado
vida libre obtiene su alimento de presas vivas y con distinta especie, obteniendo de éste su nutrición y Están constituidos por una sola célula, la cual seudopodios, flagelos, cilios, diversos tipos de
esto no sólo nos referimos a los carnívoros, sino morada, y al cual, eventualmente, puede producir debe atender a todas las necesidades vitales del vacuolas y complejas ultraestructuras que sirven, ya
también a los herbívoros los cuales se alimentan de daño. individuo. Como en toda célula, se distingue núcleo sea para penetrar en la célula huésped, o paramultipli-
vegetales vivos. A su vez, el parasitismo es tan fre­ De aquí en adelante, usaremos el término pará­ • y citoplasma. . carse o protegerse si las condiciones del medio que les
cuente en la naturaleza que constituye un fenómeno sito en el ámbito de la parasitología humana, es El núcleo, esférico o discoidal, por lo general es rodea no son favorables.
fundamental de la vida y, desde un punto de vista decir, para la referencia de protozoarios relaciona­
biológico, no se le debiera considerar como una dos con el hombre.
condición patológica, sino como un hecho normal, La distinción más general en la morfología de
TABLA 1-2
desarrollado por la interdependencia entre los seres los parásitos está dada por el número de células que
vivos o asociaciones biológicas. Para alcanzar estas los componen. Existen protozoos y metazoos pará­ CLASIFICACION DE LOS PROTOZOOS P ARASlTOS {ADAPTADOS DEL ESQUEMA DE LA SOCIEDAD DE
asociaciones biológicas, se ha necesitado el cincel sitos. Los primeros constituidos por una sola célu­ PROTOZOOLOGOS Y DE COX (1981)

�e
de la evolución que al actuar durante millares de la y los últimos, a su vez, formados por helmintos
años, permitió que estos seres, primitivamente y artrópodos integrados por millones de células. SUB-REINO PROTOZOA (organismos de una sola célula eucariótica).
vida libre, llegaran a asociarse para poder sobrevi­ PHYLUM I SARCOMASTICOPHORA (Locomoción por flagelos, seudopodios o ambos).
vir. Se puede conjeturar que muchas de las especies ..-SUBPHYLUM 1 MASTIGOPHORA (Locomoción por flagelos).
AI>APTACIONES A LA VIDA PARASITARIA Clase ZOOMASTIGOPHOREA (Sin cloroplasto).
conocidas en la actualidad como parásitos del hom­ Orden Kinetoplastida (! ó 2 flagelos, con kinetoplasto) Leishmania, Trypanosoma.
bre, lo fueron primitivamente de animales salvajes Los parásitos han derivado de antepasados de vida Orden Retortamonadida (2 ó 4 flagelos, uno dirigido hacia atrás en el citostoma) Chilomastix, Retor/amonas.
que, al ser domesticados, traspasaron su parasitismo libre, pero es sorprendente obseryar el profundo Orden Diplomonadida (2 núcleos, organelos duplicados) Giardia.
a la especie humana. cambio de sus formas y funciones, resultantes de Orden Trichomonadida (4 a 6 flagelos, típicamente con uno a lo largo de la superficie del cuerpo) Dientamoeba,
En la naturaleza las asociaciones biológicas se procesos de mutación y de selección natural. Triclwmonas.
pueden establecer entre individuos de una misma En los protozoos parásitos, se observan delicadas SUBPHYLUM 2 SARCODINA (Locomoción por seudopodios, en algunos con estados flagelares temporales).
especie o de especies distintas: estructuras destinadas a facilitar la entrada en la célula SUPERCLASE RHIZOPODA (Seudopodios).
hospedera, como son el conoide y los rhoptries de CLASE LOBOSEA (Seudopodios lobopodios).
Asociaciones biológicas entre individuos de una los coccidios, mientras que la diapedesis y diversas Orden Amoebida (Ciclo evolutivo sin estados flagelados) Entamoeba, Acanthamoeba.
Orden Schizopyrenida (Ciclo evolutivo con estados flagelados temporales) Naeg/eria.
misma especie: enzimas permiten la penetración y destrucción de .,..,,PHYLUM 2 APICOMPLEXA (Complejo apical característico al microscopio electrónico; sin flagelos ni cilios, excepto
Sociedades. Los individuos viven juntos para ob­ tejidos por Entamoeba histolytica. Pero, principal­ en gametos; los ciclos evolutivos generalmente involucran estados vegetativos (trofozoitos), multiplicación asexuada
tener su alimento, pero conservan su individualidad. mente estas adaptaciones a nivel metabólico enzi­ (merogonfa), estados sexuados (gametogonia) y formación de esporas y esporozoitos (esporogonla); todos son
Ejemplos: manadas de lobos, leones, etcétera. mático les permiten vivir en los tejidos del hospede­ parásitos).
Colonias. Los individuos viven juntos, pero su ro, bajo diversos grados de anaerobiosis (ver Capí­ CLASE SPOROZOEA (Complejo apical completo. Estados infectantes esporozoíticos, resultantes de esporogonia).
interdependencia es tal, que no pueden subsistir por tulo 2: Bioquímica y biología molecular de parási­ SUBCLASE I COCCIDIA (Trofozoitos y estados sexuados pequeños e intracelulares).
sí solos. Ejemplos: abejas, hormigas, termitas, etc. tos). Orden Eucoccidiida (Merogonia presente, parásitos muy comunes de invertebrados y vertebrados) Jsospora,
En los metazoos parásitos, tanto helmintos como Sarcocystis, Toxop/asma, Plasmodium.
Asociaciones biológicas o simbiosis entre indi- artrópodos, es frecuente la involución y atrofia de SUBCLASE 2 PIROPLASMIA (Pequeños parásitos de eritrocitos de vertebrados, transmitidos por garrapatas).
viduos de diferentes especies: sistemas y órganos, mientras otros se desarrollan Orden Piroplasmida Babesia.
.J>HYLUM 3 MIC,ROSPORA (Esporas resistentes con un esporoplasma y un filamento polar).
Mutualismo. Ambos socios se benefician, como . . . ?esmesuradamente. Existe inv<>!ución de los órga­ Orden Microsporida: Nosema, Pleistophora, Encephalitozoo11, Enterocytozoon.
, , ,
el paguro y la._actinia, los ciliados de los rumiantes '! nos motores, como las patas y alás, de los órganos de PHYLUM 4 CILIOPHORA (Locomoción por cilios; dos núcleos diferentes: micronúcleo y macronúcleo).
que permiten digerir la celulosa o los flagelados xi- los sentidos, como los ojos en los helmintos, y pre- Orden Trichostomatida Balantidium.

_]
24 PARASITOLOGIA MEDICA EL PARASITO 25

La actividad fisiológica de los protozoos se efec­ la célula. Las amibas se reproducen por fisión bina­
túa mediante lasfonnas vegetativas generalmente ria y su mecanismo principal de transmisión es por
de11ominados trofozoítos o zoítos. En muchos de fecalismo.
· estos parásitos se forman quistes, elementos de re­ Las amibas parásitas del hombre se localizan en
sistencia y multiplicación, caracterizados por su in­ el tubo digestivo, además de algunas amibas de vida
movilidad y muy baja actividad metabólica. libre que pueden afectar el sistema nervioso _central
La reproducción de los protozoos se produce y al ojo. La Entamoeba histolytica es la principal
dentro de la célula hospedera mediante procesos de amiba patógena del hombre,pero,además, en el tubo
multiplicación asexuada o sexuada (Figura 1-1). La digestivo se suelen encontrar diversas amibas co­
reproducción asexuada puede ser porfisión binaria, mensales: en la boca,Entamoeba gingivalis y en el
por fisión múltiple y por endodiogenia. intestino grueso, Entamoeba coli, Entamoeba
En la fisión binaria,la más frecuente,se produce la hartmanni, Endolimax nana, lodamoeba büt�chlii
división del núcleo en dos partes y luego del cito­ y ocasionalmente,Entamoeba polecki, amiba propia
plasma, resultando dos células hijas; se observa en del cerdo.
las amibas, los flagelados y los ciliados. En la fisión A partir de 1958 se ha descrito la capacidad de
múltiple (merogonia o esquizogonia), hay una divi­ algunas amibas de vida libre principalmente de los
sión múltiple del núcleo (esquizonte inmaduro), se­ géneros Naeglaeria y Acanthamoeba, de infectar
guido de la división múltiple del citoplasma constitu­ accidentalmente al hombre. Estos protozoos viven
e yendo los merozoítos (esquizonte maduro), los cua­ normalmente en cursos de agua y el hombre se pue­
les quedan en libertad al destruirse la célula hospe­ de infectar al bañarse en estas aguas, oportunidad
dera, ya sea para repetir este proceso merogónico o en que las amibas penetran por vía nasal. También
esquizogónico, o para producir gametos en la game­ se han descrito graves lesiones de la córnea en
togonia. Una forma muy particular de reproducción usuarios de lentes de· contacto.
asexuada ocurre con Toxoplasma y Sarcocystis, la La Entamoeba histolytica es estudiada en el Ca­
cual se conoce como endodiogenia: mediante un pro­ pítulo 8: Amibiasis y las amibas comensales en el
II. ceso de brote interno, se forman dos células hijas Capítulo 24: Otros parásitos y comensales del intes­
completas que al crecer, ocupan todo el citoplasma tino. Las amibas de vida libre, se abordan en el
de la célula madre,la cual termina por desaparecer. Capítulo 33: Amibas de vida libre potencialmente
En la reproducción sexuada, se produce durante patógenas.
la meiosis, la formación de células haploides las que
volverán al estado diploide una vez que se hayan LOSFLAGELADOS
A unido. Existen dos formas de reproducción sexuada
en los protozoos: la singamia, la más frecuente,que Pertenecen al Subphylum Mastigophoia y se ca­
es la unión completa de las dos células progenitoras, racterizan por la presencia deflagelos alargados que
y la conjugación, que sólo se observa en los ciliados se originan en un pequeño elemento del ectoplasrna,
y consiste en el intercambio de material nuclear entre el kinetoplasina, y están constituidos por prolonga­
las células progenitoras. En el Phylum Apicomplexa, ciones citoplasmáticas,el axonema,formado a su vez
luego de la multiplicación asexuada meragónica.o por una estructura cilíndrica con nueve microtúbu­
esquizogónica ya descrita, sigue la multiplicación los envueltos por una vaina fibrosa. Algunos de
sexuada con la formación de gametos (gametogo­ estos protozoos, como los tripanosomas y las
nia) y formación de esporas, esporoquistes y espo­ tricomonas, poseen prolongaciones citoplásmáticas
rozoítos (esparogonia), que serán detallados más que envuelven y recorren el cueipo, las membranas
adelante. ondulantes.
Los protozoos se clasifican, atendiendo princi­ Algunos flagelados presentan kinetoplasto, or­
palmente a sus medios de locomoción, en al)1ibas, ganeloformado a partir de mitocondrias modificadas
flagelados, ciliados y apicomplexa (Tabla 1-2). y que tiene importancia taxonómica.
LASAMIBAS Flagelados con kinetoplasto (Orden K.ineto­
plastida). A este orden pertenece la familia Trypano-
Pertenecen al Subphylum Sarcodina y se caracteri- somatidae, que comprende los tripanosomas y las
zan por poseer un citoplasma en el cual se observa Jeishrnanias. Todcis ellos tienen ciclos evolutivos
Figura 1-1. Multiplicación de protozoos. l. ASEXUADA. (Al Fisión binaria: división sucesiva del núcleo y luego del fácilmente'el ectoplasma hialino,el endoplasmagra- que se alternan en vertebrados y hospederos inver-
citoplasma, resultando dos células hijas; (B) Fisión múltiple o esquizogonia: división múltiple del núcleo, constitución del nuloso y el núcleo de aspecto diverso, según las tebrados, constituidos por insectos hematófagos.
esquizonte y formación de los merozoitQs; (C) Endodiogenia: f9.\1Ilació,n por ,�rote i,¡temo, d,e,_<;los .,§lulas hijas. 11. especies. Se movilizan mediante seudopodios que ... Presentan sólo un flagelo y la reproducción es por
SEXUADA. (A) Conjugación: intercambio de material nuclear entre las células progenitoras. (B). Singamia: fisión son extensiones en uno o varios puntos del ecto� · fisión binaria.·
completa de las dos células progenitoras. plasma,hacia los cuales se desliza ulteriormente toda Durante su ciclo evolutivo muestran grandes va-
PARASITOLOG/A MEDICA EL PARAS/TO 27

embargo, hacen excepción Trichomanas y Dienta­


maeba fragilis, los cuales no producen quistes y,
por lo tanto, la transmisión es por trofozoítos. De
todos estos protozoos sólo son patógenos Giardia
duadenalis, Trichamanas vaginalis y Dientamaeba
fragilis.
En este texto, Giardia es estudiada en el Capítulo
· 10: Giardiasis, las Trichomanas son estudiadas en
su conjunto en el Capítulo 32: Tricamanasis y los
demás flagelados, en el Capítulo 24: Otras parásitas
y comensales del t11ba digestiva.
A e o
LOSCILIADOS
Figura 1 -2. Fonna de desarrollo de los flagelados con Pertenecientes al Phylum Ciliophora, estos proto­
kinetoplasto. (A) Tripomastigoto; (B} Epimastigoto; (C) zoos se caracterizan por estar cubiertos por extensio­
Promastigoto; (D) Amastigolo. N = Núcleo; K= kineto­ nes citoplasmáticas cortas, los cilios, organelos
plasto; F = flagelo; m = membrana ondulante. adaptados para la motilidad. Presentan un macro­
núcleo y un micronúcleo. Este último, que contiene
el patrimonio genético, tiene un rol especial en la
riaciones morfológicas (Figura 1-2). El tripamasti­ multiplicación por conjugación. Otros o.rg�1;elos c�­
gata es de aspecto fusiforme, con el ldnetoplasto de racteristicos son el citas/ama o boca pnm1liva, ubi­
disposición posterior al núcleo, del cual nace una cado en el ápice de la célula y que se continúa por
membrana ondulante que recorre todo el cuerpo del el citafarinx, y una especie de poro anal primitivo, el
protozoo, para emerger como flagelo libre en el extre­ citapigia. Se reproducen por fisión binaria horizon­
mo anterior. El epimastigata es también de aspecto tal y por conjugación. El único ciliado patógeno para
fusiforme, con el kinetoplasto situado delante del el hombre es el Balantidium cali que habitualmente
núcleo, con una corta membrana ondulante y flagelo se encuentra en el intestino del cerdo y se transmite
Figura 1-3. Ultraestructura de un protozoo Apicomplexa; A=anillos polares; C=conoide; mt=micronemas; R=rhoptries;
libre. El pramastigatd tiene el mismo aspecto, pero por fecalismo. Este protozoo es estudiado en el Ca­ N = núcleo; mi = mitocondria. (Adaptado de Desportes por el Dr. Benjamín Subercaseaux).
con el kinetoplasto localizado por delante del núcleo, pítulo 9: Balantidiosis.
en la extremidad anterior del cuerpo, del cual emerge
directamente el flagelo libre, sin membrana ondulan­ LOSAPICOMPLEXA
te. Y por último, el amastigata de aspecto esférico o patrón semejante que incluye la reproducción asexua­ flagelados y móviles. La gamogonia o fertilización
redondeado, en el cual se observa nítidamente el Tradicionalmente se acepta la existencia del da (con sus fases de esparagania y de meragania ocurre dentro o fuera de la célula en la que se en­
núcleo y el kinetoplasto; aparentemente, es Phylum Sporozoa, pero con el avance del estudi� de o esquizagania) y la reproducción sexuada (con sus cuentra el macrogameto y se forma el cigoto (d), el
aflagelado cuando se le observa bajo microscopio de la ultraestructura de sus representantes, pareciera fases de gametagania y de gamagania) (Figura 1-4). cual secreta una membrana translúcida envolvente y
luz, pero, a la ultraestructura, revela ·que posee un ser más conveniente agrupar a estos protozoos en el La merogonia o esquizogonia siempre es intrace­ da origen al aaquiste (e) de aspecto ovalado o re­
corto flagelo no emergente que permanece dentro de Phylum Apicomplexa, tal como ha propuesto Levine. lular y comienza con la penetración de un esparazo{­ dondeado. El cigoto inicia la esparagania y la prime­
un saco flagelar. A la microscopia electrónica todos ellos presentan el ta (Figura l-4a) a la célula hospedera. Se caracteriza ra división de su núcleo es meiótica, de modo que los
En este libro, las leishmanias se estudian en el Ca­ complejo apical que es el conjunto de estructuras por la fisión múltiple del núcleo y la ulterior migra­ estadios ulteriores tienen un número haploide de
pítulo 27: Leishmaniasis, el Trypanosoma cntzi en el cuyas funciones se conocen sólo parcialmente, en­ ción de los núcleos resultantes hacia la periferia del cromosomas.
Capítulo 28: Enfermedad de Chagasy los tripanosomas tre las cuales se describen conoide, anillo polar, rhop­ citoplasma (lo que configura el esquizante inmadu­ Mientras en el género Cryptasparidium se gene­
del grupo brucei y el Trypanosama range/i en el Ca­ tries, micronemas y microporos (Figura 1-3). Tienen ra). El proceso culmina con la división citoplasmáti­ ran cuatro esporozoítos directamente en el citoplas­
pítulo 44: Otras parasitosis de los teyidos. un solo núcleo, carecen de cilios o flagelos (excepto ca y la fo11nación de un número variable de merozaí­ ma del ooquiste, en los demás géneros se fo11nan por
en los microgametos de algunos grupos) y se movili­ tas (esquizante madura), los cuales quedan en liber­ fisión múltiple, dos esparablastos (ooq11iste inma­
Flagelados sin kinetoplasto. Son protozoos cuyo zan mediante ondulaciones o deslizamiento del cuer- tad al destruirse la célula hospedera. Los merozoítos dura) y luego dos esparaquistes (aoquiste madura
hábitat está en el aparato digestivo y en el aparato po celular. liberados penetran a nuevas células del hospedero o espantlada). Cada esporoquíste puede dar origen
urogenital del hombre. En la boca, se encuentra Los protozoos apicomplexa que tienen importan­ para repetir el proceso merogónico o esquizogónico a dos esporozoítos (Cyclaspara) o;lo más frecuente,
Trichombnas tenax. En el intestino, se localiza Giar­ cia en patología humana son coccidios (Plasmo­ (b). Sin embargo, algunos de estos merozoítos ini­ a cuatro esporozoítos (Isaspara, Sarcacystis, Taxo­
dia duodena/is, Chi/omastix mesnili, Dientamaeba di11m, Taxoplasma, Isaspara, Cryptasparidium, Cy­ cian la fase sexuada del ciclo y evolucionan hacia la plasma) (Figura 1-5).
fragilis, Trichamanas haminis, además de dos raros c/aspora y Sarcacystis), el género Babesia y diver­ gametogonia, es decir, la formación de los gametos El ooquiste maduro o los esporoquístes libera­
flagelados pequeños, Enteramonas homfnis 1 R�­ sos géneros del Phylum Microspora. (c). Así se generan el macragametacita femenino, dos del ooquiste, abandonan al hospedero y cons­
tartamanas intestinalis. En el aparato gemtounnano precursor del macrogameto, elemento ovalado y tituyen las formas infectantes que se diseminan en
prolifera Trichamanas vaginalis. Coccidios. Los coccidios son parásitos intracelu- relativamente inmóvil dentro de la célula hospedera, el medio externo. Alcanzado el hospedero apropia­
Estos flagel�dÓs se multiplican por fisión binaria lares durante la mayor parté de su vida. Se caracte: · y el microgametacita masqulino, precursor de un do, a partir del ooquiste o del esporoquíste quedan
y la mayoria se propagan por medio de quistes; sin rizan poi presentar ciclos evolutivos que siguen un número variable de microgametas alargados, libres los esporozoítos que iniciarán el nuevo ciclo
28 •. PARASITOLOG!A MEDICA EL PARAS/TO 29

MEROGONIA O
ESQUIZOGONIA ,

( en ,\-¡e,., ('t't,,..\c, .·,

ESPOROGONIA

(e)
L..�---'
REPRODUCCION ASEXUADA
REPRODUCCION SEXUADA

meroz(!itos

GAMOGONIA O GAMETOGONIA
FERTILIZACION

Figura 1-4. Ciclo evolutivo de los coccidios que incluye la reproducción asexuada �con �us fases d� esporogonia. y de Figura 1-5. Mientras en Cryptosporidium se generan cuatro esporozoítos directamente dentro del ooquiste, en los demás
merogonia o esquizogonia) y la reproducción sexuada (con sus fases de gametogorua y de gamogoma). Est': patron de géneros se forman dos esporoquistes cada uno de los cuales con dos esporozoítos (Cyclospora) o cuatro esporozoítos
ciclo evolutivo varía en los diversos géneros de coccidios, tal como se expone en los capítulos correspondtentes. (Isospora, Sarcocystis, Toxop/asma). Los elementos que salen al exterior con las heces del hospedero son los ooquistes,
excepto en Sarcocystis en que se eliminan esporoquistes.

TABLA 1-3
SITIOS EN LOS CUALES SE PRODUCEN !'.,AS FASES DE LÓS CICLOS EVOLUTIVOS
evolutivo. En el caso de los parásitos de la malaria,
no existe este paso por el medio externo, puesto
que la gamogonia y esporogonia tiene lugar en el
Microsporidios. El Phylurn Microspora Sprague,
1977, está constituido por una gran variedad de gé­
neros de protozoos parásitos intracelulares obliga­
,•
·
!\
mosquito vector (Figura 1-6). dos, ampliamente distribuidos en hospederos inver­
DE LAS PRINCIPALES COCCIDIOSIS DEL HOMBRE 'I

1 Cuando se estudian por separado los ciclos evo­



tebrados y vertebrados. Actualmente, se desconoce
!i

lutivos de cada género de coccidios, emergen pro­ gran parte de la biología y epidemiología de los
Merogonia Gametogonia Gamogonia Esporogonia

fundas diferencias entre ellos, pero si tenemos en microsporidios, de su especificidad por determina­
mente el ciclo-tipo que hemos descrito, surge la si­ dos hospederos y de sus mecanismos de transmi­
Isospora be/li Intestino del hombre Medio externo

militud del tronco común y secuencial de todos ellos, sión y de propagación en la naturaleza. En los últi­
como veremos en los capítulos respectivos.
Medio externo
mos años, los microsporidios se han erigido con
Cryptosporidium Intestino del hombre y otros mamíferos

creciente importancia, en agentes oportunistas para


parvum

Babesias. En estos protozoos, los hospederos el hombre al provocar serias patologías en indivi­
1 definitivos son diversos géneros de garrapatas, en duos inmunocomprometidos, especialmente en el
Sarcocystis ltominis Musculatura Intestino del hombre Medio externo

las cuales se formarán esporozoítos que invadirán SIDA. Hasta ahora se han descrito los siguientes
de vaca y cerdo

sus tejidos, incluso las glándulas salivales y los géneros capaces de producir patología en el hombre:
Cavidad general
ovarios. Al chupar sangre de los hospederos inter­
Plasmodium spp. Hígado y erí- Eritrocitos del Tubo digestivo
y glándulas sali-
mediarios, la garrapata inocula los esporozoítos, los
trocitos del hombre delAnoplte/es
vales del Encephalitozoon, Enterocytozoon, Microsporidium,

cuales efectúan un ciclo que no se conoce en todas


hombre
En este libro los Apicomplexa son tratados en
Anoplteles. Nosema y Pleistophora.

sus etapas. El parásito se multiplica en los eritrocitos diversas partes: los coccidios intestinales en los
y el ciclo se completará en la garrapata hematófaga. sendos Capítulos /sosporosis, Criptosporidiosis,
Intestino del gato Medio externo

En las babesias es posible, además, la perpetuación


Toxop/asma Parte en tejidos

Ciclosporosis y Sarcocistosis; toxoplasma en el Ca­


de los huéspedes
de la infección entre las garrapata,s, con prescinden°:
gondii
pítulo Toxoplasmosis; los plas!Tlodios en elCapítulo
intermediarios y
cia de hospederos intermediarios, mediante la trans­ Malaria y babesias en el Capítulo Otros parásitos
parte en intestino
misión transovárica.
:;,_·--. .i 1.: �.......
del gato
de los tejidos.

i.
EL PARAS/TO 31
30.. PARAS/TOLOGIA MEDICA

TABLA 1-4
CLASIFICACION DE LOS PRINCIPALES HELMINTOS PARASITOS DEL HOMBRE

PHYLUM 1 PLATYHELMINTHES
Clase CESTODA (Taenia, Diplzyllobothrium, Hymenolepis, Eclzinococcus, Dipy/idium).
Clase DIGENEA (Sclzistosoma, Fasciola, Paragonimus).

PHYLUM 2 ACANTHOCEPHALA
s Clase ARCHIACONTHOCEPHALA (Moniliformis, Macracantlzorlzynclms).

PHYLUM 3 NEMATODA
Orden I Rhabditida (Strongy/oides)
Orden 2 Strongylida (Necator, Ancy/ostoma)
Orden 3 Ascarídida (Ascaris, Toxocara)
Orden 4 Oxyurida (Enterobius)
M
Orden 5 Spirurída (Dracunculus, Wuclzereria, Bn,gia, Loa, Onclwcerca)
Orden 6 Enoplida (Triclmris, Trichinella)

HELMINTOS toras y sensitivas. El sistema excretor, además de su


función excretora, actúa como un sistema osmorre­
Los helmintos son animales invertebrados, de vida gulador y termorregulador; está formado por las cé­
libre o parasitaria, conocidos como gusanos. Princi­ lulas en llama o protonefiidios, provista de largos
palmente se distinguen los Platyhelminthes o gusa­ cilios que "barren" los líquidos hacia túbulos co­
nos aplanados, los Nematoda o gusanos cilíndricos, lectores que se unen para abrirse hacia el exterior,
y los Acanthocephala (Tabla 1-4). por un poro excretor. El sistema reproductor es ex­
tremadamente complejo, pero obedece a un ·esque­
PLATEL!vIINTOS ma común: todos los cestodos y casi todos los tre­

J.
matodos (con excepción de los esquistosomas), son
Constituidos por los trematodos y los cestodos, hermafroditas. El aparato reproductor masculim;, está
los platelmintos se caracterizan por su aspecto apla­ constituido por los testículos, un sistema de túbulos
nado o acintado, con simetría bilateral, sin cavidad en el cual desembocan algunas glándulas, y el cirro
celomática. Con excepción de algunas planarias, to­ u órgano copulador retráctil. El aparato reproductor
) dos son parásitos. femenino (Figura l -6c) consta de ovario, el que,
La superficie del cuerpo está cubierta por el te­ mediante el oviducto, se conecta al ootipo, sitio en
gumento, constituido por una capa citoplasmática .el cual se producen los huevos. Además, existen
continua sincicial, con los núcleos celulares ubica­ algunas glándulas, como las glándulas vitelinas, de
dos profundamente por debajo de la capa muscular aspecto ramificado, que secretan sus productos en
superficial (Figura 1-6); su función primordial es de el oviducto, y, rodeando el ootipo, las glándulas de
absorción e-intercambio metabólico. El sistema mus­ Mehlis cuyas secreciones estimulan a las células
cular se dispone en una capa superficial colocada vitelinas. Desde el ootipo, los huevos pasan al úte­
por debajo del tegumento, la cual reviste al cuerpo ro. Finalmente, en relación con el ootipo, se en­
en toda su extensión; en los trematodos esta capa cuentra el receptáculo seminal, del cual nace un
muscular es única y en los cestodos puede existir conducto dirigido hacia la superficie, ya sea para
otra capa muscular profunda; tanto las ventosas constituir en los trematodos el canal de Laurer, el
como la faringe, presentan una musculatura muy cual puede o no abrirse al exterior, o bien, terminar
poderosa. El sistema digestivo, ausente en los ces­ como una vagina, como ocurre en los cestodos.
todos, en los trematodos está constituido por una Los platelmintos se caracterizan por presentar
boca, una faringe y un intestino que termina en ciclos ·evolutivos complejos, con estadios larvarios
fondo de saco. El sistema nervioso_ es de tipo gan­ morfológica y funcionalmente muy diferentes de los
Figura 1-6. Estructura esquemática de los trematodos. (A) Tegumento: CT= célula tegumentaria; N'= núcleo; S= sincicío;
glionar cefálico, con troncos nerviosos longitudi­ estadios adultos.
M = musculatura. (B) Célula en llama o protonefrídio. (C) Aparato reproductor femenino·: Ó = Ovario; ov = oviducto;
oot = ootípo; gl v = glándulas vitelinas; gl = glándulas de Mehlís; U= útero; e L = canal de Laurer.
nales y comisuras transversales con funciones mo-
PARASITOLOGIA MEDICA EL PAR,1S/TO 33
3.2

TABLA 1-5
CLASIFICACION DE LOS TREMATODOS PARASITOS DEL HOMBRE (ADAPTADO DE COX (1982)

CLASE DIGENEA

SUPERORDEN: 1 ANEPITHELIOCYSTIDA. En la cercaría, persistencia de la primitiva vejiga del sistema excretor.


ORDEN 1: STRIGEATIDA. Cercarías con cola bifurcada.
Familia SCHISTOSOMATIDAE. Sexos separados, pero la hembra permanece unida al macho en su canal ginecó­
_foro (Schistosoma).
ORDEN 2: ECHINOSTOMIDA. Enquistamiento de cercadas en vegetales o moluscos A
e
Familia 1: ECHINOSTOMA TIDAE. Elongados con un collar con, espinas detrás de la ventosa oral (Echinostoma).
Familia 2: FASCJOLIDAE. Aplanados con aspecto de hojas (Fasciola, Fasciolopsis).
Familia 3: PARAMPHISTOMATIDAE. Con la ventosa ventral en la extremidad posterior (Gastrodiscoides).

SUPERORDEN 2: EPITHELIOCYSTIDA. En la cercaría, la pared de la vejiga del sistema excretor es de origen


mesodérmico.
ORDEN 1: PLAGIORCHIIDA. Huevos operculados. Estilete oral presente en la ventosa oral de las cercadas.
Familia DICROCOELIIDAE. Parásitos del intestino, hígado, vías biliares y páncreas de vertebrados (Dicrocoelium).
Familia TROGLOTREMATIIDAE. Parásitos de aves y mamíferos en pulmón e intestino (Paragonimus).
ORDEN 2: OPISTHORCHIIDA. Huevos operculados. Cercarías sin estilete oral.
Familia OPISTHORCHIIDAE (Opisthorchis).
Familia HETEROPHYIDAE (Heterophyes, Metagonimus). r
D

Figura 1-7. Esquema del ciclo de reproducción asexuada de trematodos. (A) Huevo; (B) Miracidio; (C) Esporoquiste;
Trematodos el miracidio que se ha formado en su interior. Ge­ (D) Redia; (E) Cercaría; (F) Metacercaria.
neralmente, la eclosión de los huevos ocurre en el
Son platelmintos cuyos adultos son aplanados agua, dejando en libertad al miracidio, de aspecto
piriforme, pon una papila anterior retráctil; está ()
dorsoventralmente y tienen un aspecto ovalado o
foliáceo. Todos son parásitos (Tabla 1-5). Presen­ cubierto de cilios y en su mitad posterior se encuen­ necesaria para la búsqueda de otro hospedero o de oral, con ulterior desenquistamiento en el intestino
tan una ventosa muscular peribucal y una ventosa tran esbozos de las· futuras generaciones del hel­ plantas acuáticas para llegar a enquistarse. La me­ (fasciola y otros trematodos). Después del desen­
ventral o acetábulo. Casi todos son hermafroditas, minto. En el agua busca activamente al hospedero tacercaria es el estado quiescente alcanzado por la quistamiento, la migración hacia los órganos del
excepto los esquistosomas que presentan sexos se­ apropiado para continuar el desarrollo, atraído por cercaría, al enquistarse, con la pérdida de la cola, en hospedero se efectúa a través de la vía biliar (Dicro­
parados: la hembra, de aspecto cilíndrico, vive casi el moco secretado por los caracoles. Una vez encon- aquellos hospederos o plantas acuáticas. La meta­ coelium dentritic11111), por la cavidad peritoneal (Fas­
permanentemente alojada en una cavidad formada trado el hospedero, el miracidio se aplica a él por su ---� . cercaria es la forma infectante para el hospedero ciola hepatica), por la vía porta (Clonorchis sinensis)
en la cara ventral del macho, el canal ginecóforo. papila anterior e inicia el proceso de penetración, definitivo. o por la pared abdominal, permaneciendo allí por
Presentan un complicado ciclo evolutivo, con perdiendo su envoltura ciliada. Dentro del caracol, Este ciclo-tipo presenta múltiples variaciones. Es unas semanas, para luego retornar a la cavidad pe­
fases de multiplicación asexuada en moluscos y fa­ se transforma en un esporoq11iste de aspecto sacular común que exista más de una generación de esporo­ ritoneal, alcanzar el diafragma, atravesarlo, y llegar a
ses de multiplicación sexuada en vertebrados (trema­ y muy diferente del miracidio: carece de tubo diges- quistes o de redias, que falte la generación de espo­ los pulmones (Paragonimus).
todos digenéticos). El ciclo de reproducción asexua­ tivo y está cubierto de microvellosidades con inten- roquistes o de redias, o no se formen metacercarias, En este libro los trematodos son tratados en los
do se caracteriza por la sucesiva formación de esta­ sa acción absortiva, lo que asegura su papel de lo cual es inherente a los diversos géneros de trema­ Capítulos Esquistosomosis, Fasc.iolosis, Paragoni­
dios embrionarios de aspectos y funciones muy di-• "nodriza" para los embriones partenogenéticos que todos digenéticos. Así, en Fasciola hepatica existe mosis, Otros parásitos y comensales del i11testi110,
versos entre sí. Este tipo de reproducción pareciera guarda en su seno. Así se llega a formar las redias, una secuencia huevo, miracidio, esporoquiste, re­ y Otros parásitos de los tejidos.
ser una poliembrionía secuencial; es decir, la pro­ elementos alargados en los cuales reaparece el tubo días madres, redias hijas, cercarías, metacercarias.
ducción de múltiples embriones a partir del cigoto digestivo. Estas, al romper el esporoquiste que les En los esquistosomas, se forma un espqroquiste Cestodos
y sin intervención de gametos. dio origen, se diseminan por los órganos internos madre que da origen a un esporoquiste hijo, y den­
En un ciclo-tipo (Figura 1-7), se observa la se­ del caracol. Las formas evolutivas siguientes, con- tro de él se forman directamente las cercarías, las Los cestodos son helmintos exclusivamente pa­
cuencia de huevo, miracidio, esporoquiste, redia, tenidas en las redias, son las cercarias, las cuales que penetran al hospedero definitivo; es decir, en rásitos (Tabla 1-6). Aplanados dorsoventralmente,
cercaría y metacercaria. Los h11evos presentan una son de aspecto muy variado, pero caracterizadas por estos trematodos no existen redias ni metacercarias. semejan cintas y por ello se los denomina tenias;
gran variedad de formas y _tamaños; con la sola estar provistas de cola simple .o bifurcada. Las cer- La llegada al hospedero definitivo puede ser en . son de tamaño variable, pero de constitución anató-
excepción de los esquistosomas, tienen una obertu­ carías abandonan al caracol, nadan en el agua y fonna activa a través de la piel, si la forma infectan­ mica semejante, en la cual se puede diferenciar el
ra u opérculo en uno de sus polos, por donde escapa están adaptadas para tener una efímera vida libre, te es la cercaría (esquistosomas), o pasiva por vía escólex, el cuello y la estróbila (Figura 1-8).
034 PARASITOLOGIA MEDICA EL PARAS/TO 35

Diphyllobothñum latum Hymenolcpis.nana


TABLA 1-6
Tacnia solium Taenia saginata
CLASIFICACION DE LOS CESTODOS DE IMPORTANCIA MEDICA (ADAPTADO DE COX, 1982)
CLASE CESTODA
SUBCLASE EU_CESTODA
ORDEN I: PSEUDOPHYLLIDEA. Escólex con dos botrias. Los huevos eclosionan en el agua liberando una larva ciliada, A
el coracidio, y luego el desarrollo de procercoide, y plerocercoide en· huéspedes intermediarios invertebrados y
vertebrados (Diphy/lobothri11111, Spirometra).
ORDEN 2: CYCLOPHYLLIDEA. Escólex con cuatro ventosas y rostelo con o sin ganchos. Los huevos contienen un
larva hexacanto no ciliada. Fonnas larvales en huéspedes invertebrados y vertebrados.
Familia I: TAENIDAE. Adultos en el intestino de aves y mamíferos. Escólex con rostelo evertido pennanentemente,
habitualmente con ganchos. Formas larvales en huéspedes vertebrados como larvas no proliferativas (cisticercos),
o proliferativas (coenurus, hidátides) (Taenia, Echi11ococc11s).
Familia 2: HYMENOLEPIDAE. Adultos en intestinos de aves y mamíferos. Escólex con rostelo retraíble, habitual­
mente con ganchos. Formas larvales (cisticercoide) en invertebrados (insectos) (Hymenolepis). B
Familia 3: DILEPIDIIDAE. Adultos en reptiles, aves y mamíferos. Escólex con uno a ocho filas de ganchos. Forma
larval (cisticercoide) en insectos (Dipylidi11111).
Familia 4: DEVAINEIDAE. Adultos en intestinos de aves y mamíferos. Escólex con pequeñas espinas. Forma larval
(cisticercoide) en insectos o moluscos (Raillielina).
Familia 5: MESOCESTOIDIDAE. Adultos en intestino de aves y mamíferos. Escólex sin rostelo. Cic' . con tres
huéspedes (Mesocestoides).

El escólex o "cabeza" es la porción anterior del dad anterior y, por lo tanto, son más antiguas, se va e
parásito, pequeño, generalmente del tamaño de una desarrollando progresivamente el aparato genital,
cabeza de alfiler, cuya función primordial es la de de modo que se pueden distinguir proglótidas inma­
actuar como órgano de fijación, para lo cual presen­ duras, maduras y grávidas; estas últimas, contie­
ta ventosas, botrias y ganchos. Las ventosas tienen nen los huevos.
un aspecto redondeado u oval y están provistas de Los cestodos son de color blanco o grisáceo. El

t
una gruesa capa muscular; habitualmente son cua­ tegumento está cubierto en toda su extensión por
tro en un escólex. Las botrias son hendiduras lon­ solevantamiento, los micro/ricos, formados por una
gitudinales y comúnmente son dos en cada escólex. membrana que tiené macromoléculas de carbohi­
,
La mayoría de los escólices presentan ganchos, los dratos (glicocálix) y sirven para aumentar la super­ D
que, dispuestos en uno o más círculos, se ubican en ficie de absorción. Poseen dos capas musculares y

..
,
el ápex del escólex, por delante de las ventosás, en carecen de aparato digestivo. Los sistemas nervioso .
.
una zona ·retraíble conocida como el roste/o. Ade­ y excretorio, rudimentarios, pero eficaces, recorren
más de su función de fijación, el escólex posee el todo su cuerpo. Son hermafroditas y cada proglótida
ganglio nervioso principal, con numerosas termi- ·· presenta un sistema genital masculino, representa­
naciones sensitivas. El cuello es delgado, relativa­ do por un número variable de testículos que, por
mente indiferenciado, y posee la capacidad de for­ intermedio de vasos y el conducto deferente, cuya Figura 1-8. Esquema de los cestodqs: (A) Escólices. {B) Proglótidas. (C) Huevos. (D) Formas larvales: J. Cisticerco;
mar todo el resto del helminto. El cuerpo, en su dilatación final es la vesícula seminal, hacen llegar 2. Procercoide y P_lerocercoide; 3. Cisticercoide.
totalidad, recibe el nombre de estróbi/a o cadena y su contenido al órgano copulador o cirro. Al lado de·
está constituido por un número variable de progló­ este órgano se sitúa la vagina, que representa la
tidas, elementos cuadrangulares dispuestos longi­ entrada al aparato genital femenino, donde se des­ dos es muy complejo, debido .a la presencia de di­ dos se pueden agrupar en dos tipos fundamentales,
tudinalmente, uno tras otro. Las proglótidas se pro­ taca el útero capaz de almacenar gran cantidad de versos estados larvales o juveniles llamados genéri­ de acuerdo con las características biológicas de los
ducen a nivel del cuello por un proceso de multipli­ huevos y el cual tiene diversos aspectos anatómicos camente me/acestodos, que se desarrollan en una huevos.
cación asexuada, la yemación, conocido como es­ útiles para la diferenciación de las especies. Las gran variedad de hospederos intermediarios, antes Los huevos del grupo 1 corresponden a los Pseu­
trobilización. Las proglótidas recién formadas es­ proglótidas pueden fecundarse a sí mismas, o lo más de alcanzar el estado adulto en el hospedero defini- dophyllidea y algunos otros órdenes. Son homólo­
tán más cercanas al cuello y son más pequeñas. A corriente, entre dos proglótidas que se adosan. tivo. gos a los huevos de los trematodos, y, en el momen­
medida que las proglótidas se alejan de la extremi- El ciclo biológico o ciclo evolutivo de los cesto- Clásicamente, los ciclos biológicos de los cesto- to de la postura, el embrión que contiene en su
-Y

J6 PARASITOLOGIA MEDICA EL PARAS/TO 37


interior no está desarrollado. Una vez eliminados al TABLA 1-7
exterior por el hospedero definitivo, los huevos eclo­
sionan en el agua, liberando una larva microscópica CLASIFICACION DE NEMATODOS DE IMPORTANCIA MEDICA (ADAPTADO DE COX ( 1982)
redondeada y cubierta de cilios, el coracidio, que PHYLUM NEMATODA
nada libremente hasta su ingestión por el hospedero
intennediario, habitualmente un crustáceo. Luego SUBCLASE 1: SECERNENTEA (Fasmidio posterior presente)
de ser ingerida, la larva pierde sus cilios y se aloja ORDEN 1: RHABDITIDA. Hembras partenogenéticas, faringe con bulbo muscular prominente (Strongy/oides).

Q
en el hemocele del hospedero acuático, transfoF­ ORDEN 2: STRONGYLIDA. Machos con campana copulatriz. Larvas L 1 y L2 .a menudo de vida libre
mándose en el procercoide al elongarse y perder c SUPERFAMILIA 1: ANCYLOSTOMATOIDEA. Cápsula bucal prominente con dientes o láminas cortantes

,.
sus ganchos primitivos, los cuales quedan agrupa­ 1 (Ancylostoma, Necator).
dos en el cercómero en su extremidad posterior, m SUPERFAMILIA 2: TRICHOSTRONGYLOIDEA (Triclwstrongy/11s).
pero en este estadio aún no se han fonnado los SUPERFAMILIA 3: METASTRONGYLOIDEA (A11giostro11gy/11s).
esbozos de los surcos o botrias. El ciclo continúa D) ORDEN 3: ASCARIDIDA. Boca con tres labios. Faringe simple (Ascaris, Toxocara).
cuando el crustáceo infectado con el procercoide ORDEN 4: OXYURIDA. Faringe con bulbo prominente. Cola post-anal larga en las hembras (Enterobius).
es ingerido por el segundo hospedero intennedia­ ORDEN 5: SPIRUDIDA. Faringe con un corta sección anterior muscular y una sección glandular.
Figura 1-9. Esquema de los nematodos. (A) Corte longi­
rio, habitualmente un pez. El procercoide atraviesa SUPERFAMILIA 1: FILARIOIDEA. Adultos muy delgados y elongados (filarias). Generalmente vivíparos.
tudinal: C = cutícula; cel = cavidad pseudocelomática;
el intestino y se ubica en la cavidad peritoneal y en Huéspedes intermediarios son insectos hematófagos (W11c/zereria, Brugia, Loa, Onc/zocerca, Dipeta/onema,
ad = aparato digestivo; a g = aparato genital. (B) Corte
la musculatura del segundo hospedero. Entonces la Mansone/la).
transversal: C = cutícula; m =musculatura ; cel = cavidad
larva se elonga, pierde definitivamente sus ganchos pseudocelomática; i = intestino; a g = aparato genital. SUPERFAMILIA 2: DRACUNCULOIDEA. Adultos muy largos, con extremo dimorfismo sexual (hembras
embrionarios y el cercómero, y desarrolla los es­ mucho más largas que los machos). Vivíparos, huéspedes intermediarios con copépodos (Drac11nc11/11s).
bozos de las botrias. Este segundo estado larval es SUPERFAMILIA 3: GNATHOSTOMATOIDEA. Extremidad anterior separada del cuerpo con una constric­
el plerocercoide, fonna infectante para el hospe­ laris, produce yemaciones exógenas que van infil­ ción (Gnat/zostoma).
dero definitivo (Figura l-8D). trando los tejidos del huésped, como múltiples quis­ SUPERFAMILIA 4. PHYSALOPTEROIDEA. Gusanos largos y corpulentos (P/zysaloptera).
A los plerocercoides del género Spirometra se tes llenos de protoescólices, que crecen en fonna SUBCLASE 2: ADENOPHOREA (Fasmidios ausentes, la faringe habitualmente forma un esticosoma).
les llania esparganos, los que en detenninadas con­ desordenada y sin límites netos. ORDEN: ENOPLIDA.
diciones pueden infectar al hombre. En este libro los cestodos son tratados en los
SUPERFAMILIA 1: TRICHUROIDEA. Adultos con extremo anterior más adelgazado que el posterior
Los .huevos del grupo JI pertenecen al orden Capítulos Teniasis, Difilobotriosis, Himenolepiosis
(Triclzinel/a, Tric/z11ris).
Cyclophyllidea. En el momento de la postura, están y Dipilidiosis, Cisticercosis e Hidatidosis. SUPERFAMILA 2: DIOCTOPHYMATOJDEA (Dioct/zop/zyma).
larvados y en condiciones de infectar a un nuevo
hospedero. Del huevo emerge una larva, la ancas/e­ NEMATODOS
ra o hexacanto, provista de ganchos primitivos, con
los cuales se labra camino a través del intestino del Son helmintos cilíndricos, alargados y aguzados
l;ospedero intennediario y tennina por desarrollarse en los extremos, de sección redonda, con simetría fágicas que secretan sustancias líticas. Luego viene vesícula seminal, continúa por el conducto eyacula-·
en los tejidos como metacestodos, a veces muy di­ bilateral, o segmentados y de tamaño variable (Figu­ el intestino y por último, el recto con el ano, que dor y expele su contenido a través de la cloaca; a
símiles entre sí, pero que obedecen a dos órdenes ra 1-9). Muchas especies son de vida libre, pero desemboca en la cloaca. La cutícula recubre la su­ nivel del conducto eyaculador se abren las glándu­
fundamentales: el cisticercoide, y el cisticerco. El algunas llegan a ser parásitos muy importantes de perficie de faringe, esófago y recto, mientras el in­ las cementantes o prostáticas y en algunos nemato­
cisticercoide es un metacestodo de cuerpo sólido y animales y plantas. La pared externa está fonnada testino está tapizado por un epitelio cilíndrico mo­ dos (Uncinarias), puede existir una expansión tenni­
con un escólex totalmente desarrollado en su inte­ por la cutícula carente de núcleos y de naturaleza noestratificado. El sistema excretor está fonnado nal, que ayuda a la cópula, denominada campana o
rior. El cisticerco es el metacestodo que se desarrolla lipoproteica y colágena, por la hipodermis de as­ por dos túbulos colectores laterales, que desembo­ bolsa copulatriz; los espennios son amiboides y
en la familia Taenidae, caracterizado por constituir pecto sincicial y la capa muscular única, constitui­ can en un poro excretor dorsal ubicado en el tercio carecen de flagelos. El aparato genital femenino
una fonnación vesicular llena de líquido, con un da por fibras musculares longitudinales. La hipo­ anterior del gusano. El sistema nervioso está cons­ presenta el ovario, del cual parte el oviducto, des­
escólex invaginado e introvertido en su interior (Fi­ dennis se espesa en detenninadas zonas, fonnando tituido por cuatro troncos nerviosos longitudinales, emboca en el receptáculo seminal y se continúa por
gura 1-8D). cuatro cordones, dos laterales, uno dorsal y uno dos laterales, uno ventral y otro dorsal, que se el útero y vagina para tenninar en la vulva, ubicada
Las variaciones que puede alcanzar el cisticerco ventral, que recorren todo el cuerpo del helminto. intercomunican en dos círculos, las comisuras pe­ en la línea media ventral de la mitad anterior del
son muy importantes. Existe el Coenurus, típico Bajo la pared externa está la cavidad pse11do­ ríesofágicas y perigenitales; ·de estos troncos nervio­ gusano; este sistema genital puede ser único
de la Taenia multiceps, y que es un cisticerco con celomática, llamada así porque no deriva de la capa sos principales parten filetes que tenninan en papi­ (Triclwris, Triclzinel/a) o doble (Ascaris, Entero­
brotes de yemación en su membrana genninativa; media embrionaria, como ocurre en el celoma ver­ las en los diferentes órganos. Los nematodos care­ bi11s, Uncinarias). El huevo está fonnado por una
de cada uno de estos brotes, crecen hacia el interior dadero. Su contenido es líquido y está sometida a cen de sistema circulatorio. masa multinucleada, rodeada de vitelo y es fecun­
del quiste, un tallo o pedúnculo que contiene los una presión hidrostática muy alta que hace extensi­ El sistema genital se caracteriza por presentar dada en el receptáculo seminal; en su envoltura se
escólices. La hidátide zmilocular, que se observa en ble a la cutícula, la cual no tiene propiedades elás­ sexos separados en casi todos los nematodos y di­ observan tres capas; 1) la interna, vitelina, de natu­
el género Echinococcus, se carac�eriza por una ye­ ticas, y ejerce presión sobre la capa muscular longi­ morfismo sexual; las hembras son más grandes que raleza lipídica; 2) la media o cubierta verdadera, y
mación endógena múltiple a partir de la capa ger­ tudinal para producir los movimientos sinuosos que los macpos y la extremidad posterior de éstos gene­ 3) la capa externa translúcida, de naturaleza protei­
minativa, con procesos de fonnación de vesículas penniten la movilización del cuerpo. El sistema ralmente está modificada por estructuras y disposi­ ca. Los huevos o larvas abandonan al hospedero por
prolígeras llenas.de protescólices y provistas de pe­ digestivo presenta una boca, a la que le sigue la ciones.anatómicas útiles para la cópula. El aparato diversas vías, siendo la principal por el ano (neIJI�:
dúnculos cortos y sésiles. La hidátide mu/ti/ocular, faringe, recta o bulbosa, y el esófago de naturaleza genital masculino está constituido por testículos, de todos del tracto digestivo), las microfilarías que se
observada solamente en el Echinococcus multi/oc11- muscular y al cual desembocan tres glándulas eso- los que parte el vaso deferente que desemboca en la encuentran en la sangre por medio de los insectos
'38 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo2
hematófagos, o salen al exterior desde abscesos y
son más raras las veces que se eliminan por la
Presentan ciclos evolutivos heteroxénicos con
hospederos definitivos, representados por vertebra­ BIOQUIMICA Y BJOLOGIA MOLECULAR
espectoración o la orina. En el momento de abando­
nar al hospedero, el huevo puede no estar segmen­
dos, especialmente el cerdo, en los cuales se locali­
za a nivel del intestino, y hospederos invertebrados DEPARASITOS
tado (Ascaris, Trichuris), presentar la primera fase constituidos por diversos géneros de escarabajos.
de segmentación (U11cinarias), tener ya larvas for- Los huevos del parásito son eliminados con las he­ ANTONIO MORELLO, MOISES AGOSIN y YOLANDA REPETTO
madas (Enterobius) o eliminarse larvas vivas (Tri­ ces de su hospedero vertebrado e infectan a los ar­
chinella, Strongyloides, Dracunculus). El desarrd­ trópodos, en los cuales se desarrolla una serie de
llo de los nematodos comprende cuatro estados lar­ estadios larvales. Del huevo emerge el acantor, larva
vales y el estado adulto; cada etapa está marcada provista de un rostelo con ganchitos que perfora la
por el crecimiento progresivo y cambio de cutícula. pared intestinal y penetra al hernocele donde, suce­
La cutícula posee papilas alrededor de la boca, la sivamente, evoluciona a acantela y al cistacanto BIOQUIMICA DE LOS PARASITOS el nematodo se incuba en un medio anaeróbico se
cloaca y la extremidad posterior; si están situados caracterizados.por el desarrollo de la proboscis y el produce una actividad glucolítica compensatoria, lo
cerca de la boca se les llama anjidios y si están . esbozo de los órganos definitivos. El hospedero La bioquímica de los organismos parásitos ha que no ocurre con S. mansoni.
situados cerca de la extremidad posterior, fasmi­ definitivo se infecta por la ingestión de escarabajos sido poco estudiada en comparación con vertebra­ Tampoco podernos hacer generalizaciones con
dios, y tienen gran importancia taxonómica (Tabla con cistacantos. El cistacanto, una vez en el intes­ dos y bacterias. Esto es lamentable, ya que si consi­ respecto a los protozoos parásitos. Sólo ciertos gru­
1-7). tino, crece, se · diferencia en machos y hembras, derarnos el caso de los helmintos parásitos, más o pos de protozoos pueden considerarse estrictamente
En este libro, los nematodos son tratados en comienza la postura de huevos y se completa el menos dos tercios de la población humana están anaerobios, tales corno los ciliados del rumen y los
Enteroparasitosis (Ascaris, Tricocefalosis, Anqui­ ciclo. infectados. Debido a la variedad de la composición flagelados del tracto intestinal de termitas, limita­
lostomosis, Estrongiloidosis, Enterobiosis, y Otros La infección por acantocéfalos en el hombre es química de los hábitat de los parásitos, el metabolis­ dos en cuanto a sus requerimientos de oxígeno. El
parásitos y comensales del tubo digestivo) y en las rara, puesto que requiere ingerir escarabajos infec­ mo de éste tiene un interés especial. A causa de las consumo de oxígeno de los tripanosomas sanguí­
Histoparasitosis y Hernoparasitosis (Filariosis, On­ tados. Las especies encontradas en el hombre son el acentuadas diferencias del hábitat, que incluyen la neos es bastante elevado, pero, corno veremos más
cocercosis, Triquinosis, Angiostrongilosis, Larvas Macracanthorhynchus hirudinaceus y el Moni­ tensión de oxígeno, no es sorprendente que el meta­ adelante, el sistema de transporte de electrones es
migran/es, y Otras parasitosis de los tejidos). liformis moniliformis, que miden entre 10, 20 o bolismo de estos organismos varíe de una especie a diferente entre varias especies. Por ejemplo, los tripa­
más cm de largo por algunos milímetros de diáme­ otra en forma más notoria de lo que ocurre con los nosomas que pertenecen al grupo de Lewisi (T. cn,zi,
ACANTOCEFALOS tro. En este libro los acantocéfalos son mencionados vertebrados. Muchos parásitos viven en el tracto T. lewisi) son cianurosensitivos; en cambio, los tripa­
en el Capítulo 24: Otros parásitos y comensales del intestinal, cuya tensión de oxígeno es baja; por esta nosomas del grupo Evansi y Bntcei son cianuro­
Son helmintos parásitos estrictos, elongados y intestino. razón se supuso que las actividades metabólicas de insensitivos. Sin embargo, la forma de cultivo de los
cilindroídeos, de sexos separados y dimorfismo estos parásitos en condiciones fisiológicas son prin­ tripanosomas africanos es cianurosensitiva.
sexual. Carecen de tubo digestivo y presentan un ARTROPODOS cipalmente, si no por entero, anaeróbicas. Incluso, Los parásitos también difieren de organismos
tegumento adaptado para la absorción de nutrien­ algunos investigadores consideran que los procesos similares de vida libre. En general, tanto helmintos

J
tes, y una cavidad seudocelornática. Su extremidad La morfología, biología y ciclo vital de los artró­ aeróbicos no son esenciales para su supervivencia. como protozoos parásitos son fermentadores aeró­
anterior es una proboscis retráctil y cubierta de gan­ podos de· interés médico, se consideran en forma Sin embargo, todas las especies de helmintos pará­ bicos y anaeróbicos, es decir, no oxidan comple­
chitos, la cual se introduce en la pared intestinal de conjunta más adelante (véase Artrópodos de interés sitos examinados-hasta ahora son capaces de consu­ tamente la glucosa a CO2 y H,O sino que producen
sus hospederos definitivos. médico). mir oxígeno cuando éste está presente. Además, una serie de compuestos intennediarios. Aparen­
estos organismos pueden sobrevivir en un hábitat temente, estos productos finales son el resultado de
con alta tensión de oxígeno. Por consiguiente, no reacciones glucolíticas similares a las que ocurren
pueden considerarse corno anaerobios obligados. en organismos superiores. El ácido láctico, produci­
Otros parásitos viven en los tejidos de ciertos órga­ do por la fermentación de glucosa en levaduras, ha
nos y en la sangre, donde la tensión de oxígeno es sido encontrado también en L. carinii, S. mansoni,
alta. Sin embargo, este hecho tampoco significa Echinococcus granulosus y otros parásitos, pero
necesariamente que dependan de manera esencial además, los parásitos excretan ácidos corno el tígli­
de procesos aeróbicos. Como ejemplo demostrativo, co, succínico, propiónico, o:-metilbutírico y sustan­
podernos citar dos parásitos tisulares: Litomosoides cias tales corno etanol, glicerol, etc. Por otra parte,
carinii y Schistosoma mansoni; el primero, un ne­ el conocido "efecto Pasteur" observado en vertebra­
matodo, vive en la cavidad pleural, donde existe una dos, generalmente no ocurre en parásitos, lo que
tensión de oxígeno que varia de 11 a 25 mm de Hg, sugiere que los mecanismos de regulación metabó­
mientras que el segundo se encuentra en las venas lica en parásitos pueden ser distintos.
del sistema porta, con una tensión de oxígeno de 49 En este capítulo trataremos de presentar concep­
a 66 mm de Hg. Ciertas drogas, corno las cianinas, tos generales, ilustrados con unos pocos ejemplos,
que inhiben el metabolismo aeróbico, producen la especialmente de parásitos de importancia latino­
muerte del L. carinii, mientras que S. mansoni con° americana. Por necesidad, ciertos aspectos se trata­
tinúa produciendo huevos pese a que la tensión de rán con más profundidad que otros según la disponi­
oxígeno de su hábitat es más alta. Además, cuando bilidad de información al respecto.
40· PARASITOLOGJA MEDICA BIOQUJMJCA Y BJOLOGIA MOLECULAR DE PARAS/TOS 41

Metabolismo energético de parásitos Productos finales del metabolismo de hidratos La reducción de ácido pirúvico a láctico permite embargo, no se p uede generalizar respecto de la exis­
de carbono. En tejidos de mamíferos el glucógeno la reoxidación de NADH (nicotinamida adenina tencia de un ciclo de Krebs completo en parásitos.
Todos los p arásitos tienen requerimientos ener­ (glucosa) es degradado a ácido láctico en condicio­ dinucleótido reducido) formado durante la oxida­ Se acep ta generalmente que la forma de cultivo de la
géticos, como todos los seres vivos, p ara sintetizar nes anaeróbicas. En medio aeróbico, el ácido láctico ción de triosas, lo que permite que moléculas adicio­ mayoría de los tripanosomas poseen un ciclo de Kebs,
macromoléculas, crecimiento, actividad mecánica, no se acumula sino que es oxidado a C02 y H,O. En nales de glucosa sean nuevamente degradadas. Sin como asimismo en Trichomonas gallinae y los p ará­
procesos de diferenciación, transporte activo, etc. el caso de levaduras, en lugar de ácido láctico se embargo, como vimos anteriormente, no siempre se sitos de la malaria. Parece no existir en la forma
Los p arásitos p or lo general tienen una alta veloci­ produce etanol y C02 en condiciones anaeróbicas. p roduce lactato como p roducto terminal de la glucó­ sanguínea de los tripanosomas africanos y en E.
dad de crecimiento o multip licación, lo que resulta Una de las características más interesantes de los lisis de parásitos y otras reacciones tenninales de histolytica. En cambio, en helmintos existe buen cri­
en una gran demanda p ara la generación de energía. p arásitos es la fermentación aeróbica y anaeróbica este tipo de fermentación deben ser responsables de terio de un ciclo completo en el estado larval de E.
El metabolismo energético se refiere a los procesos de hidratos de carbono con la producción de varia­ la reoxidación del NADH. Además de la demostra­ granulosus y en T. spiralis y F. hepatica. Sin em­
que resultan en la síntesis de ATP. dos productos metabólicos finales. En general la ción de enzimas glucolíticas en numerosos parási­ bargo, parece poco probable que parásitos tales como
utilización de hidratos de carbono y el tipo de pro­ tos, se han realizado experimentos con radioisóto­ áscaris o T. tae11iaefor111is tengan un ciclo completo,
Metabolismo de hidratos de carbo110 ductos finales son similares en condiciones anaeró­ p os, utilizando glucosa marcada con un isótopo en aunque se han demostrado algunas reacciones inter­
bicas o aeróbicas y sólo en algunas ocasiones se ha carbones individuales. En estas condiciones, se ha mediarias. Como vimos anteriormente, la produc­
La mayoría de los p arásitos obtiene la energía observado un efecto Pasteur. Ascaris lumbricoides visto que la radioactividad que aparece en los p ro­ ción de ácido succínico en áscaris requiere la pre­
necesaria_ para su metabolismo a través de procesos
p roduce en condiciones aeróbicas y anaeróbicas áci- ductos finales de la fermentación de esta glucosa, sencia de varias enzimas del ciclo de Krebs. Aconi­
anaeróbicos. Esto es particularmente evidente en el dos acético, propiónico, butírico, alfametilcarbinol tanto en protozoos como helmintos sólo puede ex­ tasa, deshidrogenasas isocítrica, succínica y málica
caso de helmintos intestinales, que poseen un hábi- (acetoína). Echinococcus granulosus excreta ácido han sido descritas en T. cruzi mientras que en T.
plicarse por la operación de la vía glucolítica. Debe­
tat con baja tensión de oxígeno y que pueden sobre- láctico, acético, propiónico y succínico y en condi- mos recalcar, sin embargo, que las enzimas gluco­ rhodesiense sólo se han demostrado aconitasa, fu­
vivir períodos p rolongados de anaerobiosis. Sin ciones aeróbicas se agrega ácido pirúvico. Trypano- líticas de algunos parásitos no siempre son idénticas marasa y deshidrogenasas isocítrica y succínica. De
embargo, estos mismos parásitos pueden vivir en soma c11izi produce ácidos acético y succínico tanto a las de otros organismos. Por ejemplo, en L. dono- estas enzimas, la deshidrogenasa succínica parece
presencia de oxígeno e incluso son capaces de utili- aeróbica como anaeróbicamente y en condiciones . vani una sola hexoquinasa fosforila glucosa, fructo­ estar ampliamente distribuida en la mayoría de los
zarlo cuando está disp onible. Lo mismo ocurre con aeróbicas también se observa la formación de CO,. sa, manosa y glucosamina. En cambio, en S. man­ parásitos.
numerosos p rotozoos parásitos que pueden desarro- El ácido succínico es muy frecuente como producto soni y protoscóliées de E. granulosus existen por lo En organismos superiores la glucólisis y el ciclo
,.
11arse en condiciones anaeróbicas mejor que en pre- final de fermentaciones aeróbicas y anaeróbicas en menos 4 hexoquinasas distintas, cada una fosforila de K.rebs están acoplados a un sistema de transporte
sencia_ de oxígeno. Un mismo parásito p uede pasar
p rotozoos y helmintos y su mecanismo de produc- glucosa, fructosa, manosa y glucosamina, respecti­ de electrones en el que participan bemop roteínas
por varios estadios evolutivos, algunos de los cuales ción se describirá más adelante. vamente. del tipo citocromo. El sistema citocromo es aeróbico
pueden ser p redominantemente anaeróbicos. De esto Los tripanosomas africanos poseen un metabo- Las 4 hexoquinasas pueden separarse una de otra y puede operar a tensiones de oxigeno no inferiores
se desp rende que debemos considerar a los parásitos lismo que dep ende de hidratos de carbono exóge- a 5mm de Hg. Dado el hábitat de numerosos pará­
por procedimientos de fraccionamiento de enzimas
como anaerobios facultativos, es decir, que en con- nos, los que son fermentados a ácido pirúvico y otros y, aunque parecen ser similares en ambos organis­ sitos, es dudoso que un sistema citocromo sea ope­
diciones anaeróbicas son capaces de obtener ener- productos incomp letamente oxidados. Otros proto- mos, difieren en la especificidad hacia ciertos sus­ rativo. En cestodos, se ha demostrado que el cianuro
gía derivada de hidratos de carbono por fermenta- zoos son cap¡¡ces de producir hidrógeno molecular, tratos. Un ejemp lo interesante es la quinasa fosfo­ inhibe la respiración de Diphyllobothrium latum, E.
ciones anaeróbicas similares a las bacterias estricta- tales como E. histolytica y T. Joetus. La E. histoly- glicérica de E. histolytica que parece ser selectiva granu/osus, H. diminuta, M. expa11sa y Taenia hy�
mente anaeróbicas, mientras que en presencia de tica mantenida en cultivos axénicos produce, en datigena, lo que sugiere la presencia de un sistema
para nucleótidos de guanina, contrariamente a lo
oxígeno pueden tener cierta actividad oxidativa. Es condiciones aeróbicas, CO,, acetato y etanol. que ocurre con la quinasa de otros organismos, que citocromo. Sin embargo, la respiración de D. latum
posible que aquellos p arásitos que viven en ambien- es esp ecífica para nucleótidos de adenina. Pareciera y Tae11ia /ucci no es inhibida por monóxido de
tes aneróbicos sean cap aces de utilizar oxígeno para Metabolismo intermediario de hidratos de car-
que esta enzima metaboliza guanosina trifosfato en carbono, indicando que la citocromooxidasa está
ciertos procesos biosintéticos, tales como la síntesis bono. La utilización de hidratos de carbono (gluco-
lugar ·de adenonina trifosfato en E. histolytica. En ausente o corresponde a una oxidasa exp ecial. En
de colágeno en áscaris. sa) en condiciones anaeróbicas se realiza en parási-
tos a través de las reacciones de la glucólisis. Aun- este sentido, el "pool" de nucleósidos trifosfato de M. expansa y T. hydatigena se ha demostrado un
Los únicos parásitos que p ueden considerarse este parásito está formado sólo en un 50% por ade­ sistenia de transp orte de electrones en el que parti­
estrictamente anaeróbicos son los ciliados del ru- que no en todos los pará�itos examinados se ha
nosina tri fosfato. Von Brand, en 1966 y 1972, des­ cip a un citocromo del tipo "b", posiblemente similar
men y ciertos flagelados de las tennitas, que incluso encontrado evidencia de una secuencia glucolítica
completa Y sólo se han comp robado algunas enzi- cribió en detalle las características de otras enzimas al de Ascaris. También se han aislado pequeñas
mueren en p resencia de oxígeno. En anaerobios, el glucolíticas en numerosos parásitos. cantidades de citocromo C y e,. El empleo de
trabajo celular está acoplado a fosforilaciones al mas claves, es evidente que este pasaje metabólico
0_curre !11nto en p rotozoos como en helmintos pará- inhibidores indica que, aunque existen ambos cito­
nivel del sustrato, como las que ocurren en las reac- Transporte de electrones cromos (el C y el C1 ) no participan en la oxidación
ciones de la glucólisis. En condiciones anaeróbicas, sitos. Sm embargo las etapas terminales de la glucó-
lisis en parásitos parecen diferir con lo descrito en de NADH y en la conversión de fumarato a succina­
el oxígeno es reemp lazado p or sustancias inorgáni- Es un hecho aceptado que las mitocondrias cons­ to. El citocromo del tipo "C" de M. expansa que
ca que soµ receptores de electrones y protones. Aque- organismos de vida libre. Por ejemplo, en la glucó-
tituyen el sitio principal de la respiración en tejidos tiene una banda alfa a 557 nm parece no participar
llos parásitos que poseen un sistema citocromo para lisis clásica, la glucosa es degradada a 2 moles de
de mamíferos. También se ha demostrado que en en la respiración aeróbica del parásito. La oxidación
su transporte de electrones y en los que la fosforita- ácido lácti�o a través de reacciones que no requieren
helmintos y numerosos protozoos hay estructuras de NADH ocurre por una vía diferente, catalizada
ción puede ocurrir no sólo a nivel de sustrato, sino la presencia de oxígeno. En esta conversión fosfato
ADP (ad�n?sina difosfato), ATP (ad�no_si�a trifos� equivalentes a mitocondrias, en mayor o menor gra­ p or flavop roteínas. Estudios más detallados con
acop lada también al transp orte de electrones, pue-
f��o) participan de acuerdo con la sigmente ecua- do de desarrollo. En A. /11111bricoides y en Tae11ia p reparaciones enriquecidas en mitocondrias, indi­
den considerarse como aerobios. Ejemp lo de estos taeniaeformis se han descrito típicas mitocondrias. can que M. expa11sa p osee un sistema de transporte
n g ne
_ -p_ _ _e_ _ ra 1 _: .,....:.··-'-:•0_·_·'._,_._· ---------.......,
últimos serían los tripanosomas del grupo Lewisi (T.-' u <;' / Los trip anosomas, en cambio, poseen. un• organelo de electrones ramificado, con dos oxidasas termina­
cnizi) qu� poseen un sistema citoc_romo similar al de r glucosa: :- :- •
+ 2Pi + 2 ADP ➔ 2 lactato + 2 ATP + 2H,O característico, el quinetoplasto, que es una región les; Una de éstas es un citocromo de tipo o (con
los mamiferos. especializada de una mitocondria elongada. Sin absorción máxima a 552 y 556 nm) que intervendría
• fosfato inorgánico
4.i PARAS!TOLOG!A MEDICA B!OQU/MICA Y B/OLOGIA MOLECULAR DE PARtlS!TOS 43

en la reducción de furnarato a succinato. La otra oxi­ panosornas cianuro-sensitivos, corno asimismo las sp. no poseen un sistema citocrorno clásico. Tampo­ esta forma, el parásito tendría acceso a fosfatos orgá­
dasa corresponde a una citocrornooxidasa clásica. formas que habitan el intestino medio de insectos co se ha demostrado la presencia de rnitocondrias nicos que en otra forma no estarían disponibles; se
En o·tras palabras, un sistema de transporte de elec­ poseen un sistema rnitocondrial similar al descrito típicas, pero el citoplasma contiene una serie de defendería de las enzimas digestivas presentes en el
trones funcionaria en condiciones anaeróbicas, con para Critlzidia fasciculata. El sistema está compues­ organelos, algunos de los cuales podrían correspon­ tracto digestivo de su vector y, en su estadio intrace­
la producción de succinato y reoxidación de NADH, to de citocrorno a + a, b, c 555, coenzirna Q9 y cito­ der a rnitocondrias modificadas. En T. foetus se han lular, de las existentes en los lisosornas de los macró­
mientras que el otro sería de carácter aeróbico. La cromo oxidasa del tipo o. El mismo sistema parece demostrado tres tipos organelos: uno contiene des­ fagos en el mamífero.
participación de flavoproteínas en el sistema anaeró­ existir en tripanosomas sanguíneos cianurosensiti­ hidrogenasa rnálica, otro hidrolasas y fosfatasas, y
bico está apoyada por la formación de peróxido en ' vos de la sangre y en Leishmania. Las característi­ el tercero, fosfatasas. Síntesis de proteínas
estas condiciones. cas del transporte de electrones en tripanosomas
..,
El uso de inhidores ha permitido admitir la parti­ sanguíneos cianurosensitivos todavía no se cono­ Organelos intracelnlares Existe bastante información respecto a síntesis
cipación de ferroproteínas del tipo no-hern en rnito­ cen con certeza. de proteínas in vivo en relación con el desarrollo y
condrías de T. taeniaefonnis. En trernatodos tales La sensibilidad al cianuro de los tripanosomas Numerosos parásitos poseen diversos organelos crecimiento de los parásitos, pero prácticamente muy
corno S. mansoni se ha visto que el citocrorno C y la africanos varía de acuerdo con el estadio evolutivo. subcelulares que han sido especialmente estudiados poco se ha hecho en relación con la elucidación de
citocrornooxidasa están en tan baja cantidad, que Las formas de cultivo o del intestino medio del in­ en protozoos. Ya mencionarnos los organelos extra­ las etapas intermediarias del proceso. Los riboso­
no pueden representar más de un 10% del consumo secto vector son sensibles al cianuro y parecería rnitocondriales que contienen L-alfa-glicerofosfato mas de Plasmodim lmowlesi han sido aislados sien­
de oxígeno del parásito. En F. hepatica se encuen­ que poseen citrocrornos y enzimas del ciclo Krebs. en tripanosomas. Otros organelos son los peroxiso­ do una de las dificultades que se presentó con este
tra citocrornos de tipo C i , C (a:+ a, ) pero en bajas En cambio, las formas delgadas (rnonornórficas) son rnas, que poseen una membrana única y que contie­ material fue la eliminación de los pigmentos del
concentraciones, y Prítchard, plantea que el parási­ insensibles al cianuro. Esta refractariedad al cianu­ nen oxidasas capaces de producir peróxidos catala­ parásito y las posibilidad de contaminación bacte­
to también posee dos sistemas de transporte de elec­ ro puede explicarse por la presencia de un sistema sa. riana. Al incubar estos ribosomas en un medio que
trones: rnitocondríal muy poco desarrollado; la respiración Ciertos protozoos de vida libre (Acanthamoeba contiene los cofactores usuales para la síntesis pro­
terrainal en las formas rnonornórficas se realiza a tra­ castellani) poseen partículas intracelulares que con­ teica, se encontró una activa incorporación de ami­
l. NADH flavoproteína citocrorno tipo vés de una oxidasa particulada; la L-alfa-glicerofos­ tienen catalasa y urato oxidasa. Estos organelos no noácidos en proteínas. Los resultados obtenidos in­
furnarato fato oxidasa, que reemplaza al sistema citocrorno. corresponden a rnitocondrias. En Tetralzymena pyri­ dican que P. lmowlesi sintetiza proteínas vía inter­
b citocrorno tipo o oxígeno Sin embargo, cuando las formas rnonornórficas evo­ formes existen peroxisornas que contienen oxidasas mediarios tipo aciladenilato y aminoacil-tRNA. La
lucionan en la sangre del huésped vertebrado, las para alfa-hidroxiácidos y D-arninoácidos, además incorporación del aminoácido es inhibida por puro­
2 Succinato flaboproteína ferroproteína del tipo rnitocondrias se desarrollan y aparecen numerosas de catalasa. micina pero no por clorarnfenicol o estreptomicina.
no-hern citocrorno tipo b crestas. NADH es reoxidado en las formas delga­ Además, estas partículas en T. pyriformes contie­ Se demostró que la cicloheximida, un inhibidor de
citrocrorno o oxígeno dos por la L-alfa-glicerofosfato oxidasa, mientras nen enzimas del ciclo glioxílico. En Triclzomonas síntesis proteica, tiene un efecto débil en el sistema
que en las sanguíneas (cortas), lo es a través de un Joetus, la catalasa no se encuentra localizada en de P. knowlesi. Tampoco se obtuvo inhibición me­
En nematodos, pese a que han sido estudiados sistema respiratorio rnitocondríal. Es interesante organelos, pero alfa-glicerofosfato y malato deshi­ diante la adición de cloroquina. Los ribosornas tie­
más extensamente desde el punto de vista bioquími­ hacer notar que la lipoildeshidrogenasa está locali­ drogenasas están en un organelo, relativamente gran­ nen una constante de sedimentación de 70 a 80 s,
co, existe gran confusión en cuanto al sistema de zada en organelos extrarnitocondriales en las for­ de. Otras enzimas, especialmente hidrolasas (pro­ con subunidades de 60 y 44 s.
transporte de electrones. Krnetec y Bueding demos­ mas rnonornórficas, pero en las formas sanguíneas teasas, beta-N-acetilglucosarninidasa, beta-N-ace­ Se acepta que en células eucarióticas, el precur­
traron que en una fracción particulada de músculos la actividad enzimática está localizada eíi las rnito­ tilgalactosaminidasa, beta-galactosidasa II) y una sor de RNA ribosórnico se sintetiza en el nucléolo
de áscaris, la oxidación de succinato y NADH de­ condrias. Aparentemente, sólo aquellos tripanoso­ gran parte de la fosfatasa ácida, están asociadas con que contiene las enzimas necesarias para la polime­
penden de la tensión de oxígeno y que Mn++ , cata­ mas que pueden desarrollar un sistema citocromo otras partículas. Todas estas partículas parecen no rización del RNA. El primer precursor del RNA es
lasa y etanol se requieren para máxima actividad. Esto pueden ser heteroxenos y continuar su desarrollo corresponder a peroxisornas y no a mitocondrias la especie con sedimentación de 45 s que luego se
es congruente con la idea de que una o varias flavo­ en un insecto vector. degeneradas, pese a que la catalasa es soluble. transforma a una especie de 35 s. Esta última se
proteínas participan en el sistema. Además, la con­ El sistema rnitocondríal de los tripanosomas está La fosfatasa ácida, que en mamíferos se conside­ parte para dar los RNA rihosómicos 18 y 28 s. En
versión de furnarato a succinato en presencia de asociado a un organelo conocido corno quinetoplas­ ra corno de localización lisosornal, representa un Plasmodium berglzei no hay una estructura que apa­
NADH se demostró en condiciones anaeróbicas. to. Este contiene esencialmente todo el DNA mito­ ejemplo interesante de esp·ecialización en parásitos. rentemente corresponda al nucléolo, de manera que
Mitocondrias de músculo de áscaris contienen cito­ condrial de la célula. No se conoce la función del La fracción que corresponde a la membrana plas­ la síntesis del RNA ribosómica podría ser distinta.
cromos reducibles por sustratos de los tipo a, b y c y DNA quinetoplástico en tripanosomas, pero se pien­ mática en varios triponosornátidos posee gran can­ En células eucarióticas se encuentra, mediante ex­
una oxidasa terminal de tipo a,. Citocrorno c y un tipo sa que puede codificar en la síntesis de algunos com­ tidad de la enzima; en cambio, en otros tripanoso­ perimentos de niarcación con radioisótopos, que la
nuevo de citocrorno b, denominado citocrorno b 580 ponentes de la membrana rnitocondrial interna. El mas, la enzima está esencialmente restringida a la primera especie de ácido ribonucleico en marcarse
Ascaris, se han purificado y analizado. Además, en quinetoplasto puede alterarse mediante el tratamien­ zona del reservorio flagelar; finalmente, en Leislz­ es la 18 y 28 s, respectivamente, aparecen como
rnitocondrias del parásito se han comprobado enzi­ to de ciertas drogas, tales corno la acriflavina, produ­ mania donovani, agente etiológico de la leishma­ partículas de ribonucleoproteína con coeficientes de
mas del ciclo de Krebs. Esas observaciones indica­ ciéndose las denominadas cepas disquinetoplásti­ niasis visceral humana (kalazar) la fosfatasa ácida sedimentación de 40 y 60 s. En P. berglzei se obtiene
rían que un sistema clásico de transporte de electro­ cas. Estas últimas poseen enzimas respiratorias dis­ no sólo es de localización intracelular y dentro de la la ribonucleoproteína 40 s, pero el RNA de esta
nes existe en este organismo. minuidas. Ciertas especies de tripanosomas que son zona del reservorio flagelar, sino que también se partícula no es 18s sino que 15 s. Además, esencial­
Posiblemente, flagelados parásitos de la familia naturalmente disquinetoplásticas, debido a la dismi­ detecta extracelularmente en toda la parte externa mente, no hay síntesis de la ribonucleoproteína de
Trypanosornatidae han sido los más estudiados en nución del aparato rnitocondríal, funcionan esencial­ de la membrana celular. Lo interesante de esta últi­ 60 s. Esta última contiene un RNA tipo 25 s. Es
relación con el transporte de electrones. Los tripa­ mente a través de la gucólisis con escaso o nulo ma localización es que el centro activo de la enzima posible que la ribonucleoproteína 60 s no sea sinte­
nosomas del grupo Lewis{. difie�en de otros espe­ metabolismo oxidativo rnitocondrial. ., ,., es accesible ¡¡,]os sustratos que sólo se encuentran en tizada por el parásito sino.que provenga de la célul_a
cialmente por su acentuada sensibilidad al cianuro Otros protozoos han sido objeto de muy pocos el medio extracehilar. Es posible que este sea un huésped.
y azida, y se acepta actualmente que todos los tri- estudios. Por ejemplo, pareciera que Triclz omonas fenómeno de adaptación a la vida parasitaria. En En helmintos parásitos se ha demostrado que la
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44 PARASITOLOGIA MEDJC,l BIOQUIMICA Y BIOLOGIA MOLECULAR DE PARAS/TOS 45

síntesis proteica enEchinococcus granulosus se rea­ En general, los ácidos nucleicos de los parásitos con Giemsa aparece en forma de copas, indicando como asimismo diferenciar las tres especies de
liza a través de aminoacil adenilatos y aminoacil-tR­ parecen similares a los de los organismos superio­ que mantienen su estructura bidimensional que po­ esquistosomas.
NAs. El sistema es inhibido por puromicina y ribonu­ res. Los distintos tipos de ácidos nucleicos y su seen. en las células las partículas y tiene un peso
cleasa pero no por actinomicina D o cloramfenicol. concentración en numerosos parásitos pueden en­ molecular de± 101º daltons. En Leishamania taren­ Diagnóstico de enfermedades parasitarias. Las
Las aminoacil sintetasas del parásito son específi­ contrarse en la excelente monografia de Von Brand, tolae parece haber un solo tipo de minicírculos. técnicas basadas en la recombinación de DNA se
cas, ya que no son capaces de amínoacilar tRNA de de 1972. De gran interés es la presencia de ácido Quinetoplastos de esta misma especie también con­ están utilizando para preparar sondas de DNA para­
hígado de rata pueden aminoacilar el tRNA de E. desoxirribonucleico extranuclear en protozoos y tienen dos especies de RNA con coeficientes de se­ sitarias (leishmaniosis,filariosis, malaria, oncocer­
gram1/os11s. '
helmintos. El más estudiado es el que se encuentra dimentación de 9 a 12 s. La síntesis de estas especies cosis). Estas sondas permiten la identificación de
asociado con el quinetoplasto de hemoflagelados. es inhibida por bromuro de etidium. Ambas especies 'parásitos en huéspedes humanos y animales y en
Acidos nucleicos En cortes delgados examinados con el microscopio se hibridizan en forma de minícírculos. No se cono­ insectos vectores. La investigación se basa en la pre­
electrónico, el DNA del quinetoplasto aparece como ce la naturaleza y función de estos RNAs. misa de que todos los organismos contienen en su
'I:imidina-5'-trifosfato es un o de los 4 desoxirri­ una superficie cóncava formada por fibras paralelas Es interesante hacer notar que las formas más genoma secuencias de DNA que permiten diferen­
bósido trifosfato esenciales para la síntesis de DNA. orientadas longitudinalmente, situadas cerca del primitivas de hemoflagelados poseen la mayor can­ ciarlos de otros organismos estrechamente relacio­
Timidina-5'-monofosfato, un precursor de timidina- cuerpo basal pero dentro de la matriz mitocondrial. tidad de DNA quinetoplástico en las fibras dispues­ nados. En general, estas sondas de DNA se han de­
5 '-trifosfato, se sintetiza de nuevo por metilación de Aparece como unido a la membrana y existe en tal tas en forma desordenada; las formas más avanzadas rivado de secuencias de DNA altamente repetitivas
deoxiuridina-5 '-monofosfato o a partir de timidina concentración , que puede observarse con el mi­ poseen menos DNA que está en la configuración que se encu�ntran ya sea en el DNA extracromo­
preexistente. Esta última reacción es catalizada por la croscopio de fase contrastada. El DNA de este or­ precisa descrita antes. somal (por ejemplo, DNA del kinetoplasto) o en el·
timidina quinasa. La presencia de timidina quinasa ganelo se ha obtenido como una forma satélite me­ DNA genómico y han sido identificadas y aisladas
en tripanosomas ha sido demostrada por la incorpo­ diante ultracentrifugación de CsCL o Cs,SO4• Lo más usando técnicas de recombinación del DNA. Este
ración de tirnidina en DNA, tanto en tripanosomas interesante de esta preparación es la presencia de BIOLOGIAMOLECULAR tipo de sondas perm.ite diferenciar Leishmania bra­
del grupo Lewisi como del Bnicei. Una diferencia minicírculos de sólo 0,29 µ de circunferencia, que . siliensis y Leishmania mexicana y se están utilizan­
entre la enzimas del tripanosoma y las de mamíferos contienen alrededor de 838 pares de bases. Los cír­ El desarrollo explosivo de la biología molecular do en forma rutinaria para el diagnóstico de leishma-
es la escasa similitud de las primeras a retroínhibi­ culos aparecen libres o entrelazados con otros. El en los últimos años ha contribuido enormemente a niosis cutánea.
ción, lo que podría ser importante en la quimioterapia minicírculo específico de la especie en Leishmania nuestro conocimiento bioquímico de los pai;ásitos.
racional de esta parasitosis. y en tripanosomas africanos mide 0,29 µy en tripa­ En un comienzo se pensó que los enfoques, bio­ Desarrollo de vacunas antiparasitarias. Aun­
Similares observaciones se han hecho en Schis­ nosomas del grupo Lewisi de 0,4 a 0,5 µmientras químicos y molecular serian excluyentes. Feliz­ que todavía no se han obtenido vacunas antipara­
tosoma mansoni. La síntesis de nucleótidos de este que en Crithidia fascicu/ata mide O,79 µ. La mi­ mente, los esfuerzos han sido cooperativos, con la sitarias mediante el uso de técnicas de biología mo­
parásito se realiza por vías múltiples. La actividad croscopia electrónica combinada con el uso de en­ ventaja de que la biología molecular está ayudan­ lecular, laboratorios en varios países del mundo han
de adenosina fosforribosil transferasa es mucho donucleasa de restricción, ha permitido identificar, do a resolver viejos problemas biológicos difíciles conseguido resultados espectaculares en malarja y
mayor que la de adenosina quinasa. La adenosina además de los minicírculos, un segundo componente o tediosos de abordar con técnicas puramente bio­ tripanosomosis. Los avances más importantes se
se convierte en AMP vía adenosina deaminasa, pro­ menor que se ha denominado maxicírculo. Estos químicas. Las contribuciones de la biología mole­ han realizado con los tripanosomas africanos, Sa­
ceso seguido por la conversión de inoxina a hipoxan­ varían en tamaño de 6 micrones en Trypanosoma cular se han concentrado en tres áreas de gran bemos que la variación antigénica es el mecanismo
tina. En esta secuencia, la hipoxantina fosforribosil bnicei a 1 J· micrones en Crithidia; carecen de hete­ relevancia en el control de las enfermedades para­ empleado por algunos tripanosomas para evadir ra
transferasa es limitante. La importancia de estas ob­ rogeneidad de secuencia o de secuencias internas sitarias. Estas son: a) taxonomía parasitaria, b) respuesta inmunitaria del huésped. La estrategia de
servaciones reside en la posibilidad de utilizar aná­ repetidas. Los maxicírculos representan posiblemen- diagnóstico y c) desarrollo de vacunas antipara­ sobrevida del parásito se basa en la existencia de
logos de nucleótidos como agentes quimioterapéu­ te el equivalente del DNA mitocondrial de organis­ sitarias. Pese a la orientación práctica de estas in­ una envoltura continua en su superficie, formada
ticos. mos superiores. Los maxicírculos se han encontra- vestigaciones, ellas han contribuido a nuestro co­ por una sola glicoproteína contra la cual es dirigida
Los tripanosomas parásitos incorporan purinas y do también en Trypanosoma cnizi. nocimiento biológico del parásito. El impacto de la la respuesta inmunitaria del huésped. Mediante la
pirimidas exógenas en sus ácidos nucleicos, pero al­ Se ha intentado clasificar los tripanosomas basa­ biología molecular en parasitología puede apreciar­ producción consecutiva de un gran número de dife­
gunos parecen ser capaces de sintetizar por lo me­ dos en las caracteristicas de la digestión de los mini­ se por los siguientes ejemplos: rentes variantes de esta glicoproteína de la mem­
nos sus pirimidinas y requieren sólo adenina como círculos con endonucleasas de restricción; sin em­ brana, una fracción de la población de parásitos
fuente exógena de purinas, que es abundante en la bargo algunos autores consideran que este criterio Taxonomía de parásitos. Uno de los problemas sobrevive. Estas glicoproteínas de superficie for­
célula del huésped. Los parásitos de la malaria, pare­ no es muy sólido debido a que los minicírculos evo­ más serios del parasitólogo es la diferenciación de man una capa de alrededor de 13 a 15 nm de espesor
cen ser capaces de sintetizar pirimidinas. Es posible lucionan muy rápidamente, lo que se demuestra por los parásitos dentro de una subespecie. La diversi­ y representan 7 a.¡ 0% de la proteína celular. Están
que la biosintesis de pirimidinas en estos parásitos los cambios que se observan en las caracteristicas dad intraespecífica parece ser la base de las infec­ formadas por un solo polipéptido de alrededor de
requiera cofactores tipo ácido fálico, lo que podría de fragmentación en relación con la edad y número ciones parasitarias y evidentemente está relaciona­ 500 aminoácidos, a los cuales se agregan varias ca­
explicar el efecto antimalárico de los antifolatos. La de subcultivos de cepas de Crithidia mantenidas en da con la epidemiología de la enfermedad. El uso de denas laterales constituidas por hidratos de carbo­
única enzima de la vía del folato demostrddo en pa­ el laboratorio. En cambio, la secuencia de los maxicír­ marcadores genéticos ha permitido resolver el pro­ no que representan alrededor de 7 a 17% de la masa
rásito de la malaria es la dihidrofolatoreductasa. La culos es estable y los fragmentos caracteristicos que blema taxonómico que ocurre en numerosos parási­ de la glicoproteína. Se espera que una vez que se
misma enzima ha sido descrita en varias especies de se producen por las endonucleasas de restricción tos. Un caso concreto existe en esquistosomas. El identifiquen los mecanismos que regulan la produc­
tripanosomas. serian un excelente criterio para la taxomanía bioquí­ análisis de DNA de cepas de esquistosomas y de ción de esta glicoproteína de membrana, se podrán
Recientemente, se ha demostrado que la síntesis mica de los tripanosomas. parásitos individuales por la llamada técnica de obtener vacunas de alta eficacia contra esta tripa­
de 110vo de pirimidinas es un fenómeno común en El DNA del quinetoplasto se ha aislado de diver­ Southern blotting, mediante el uso de secuencias nosomosis.
protozoos y h!\tmintos. La excepción la constituiría sos flagelados. El DNAaislado está formado por.una · clonadas del gen ribosomal, ha permitido diferen­ Los esfuerzos para obtener vacunas antimalári­
Trichomonas vagina/is que no parece poseer las en­ población homogénea de partículas que pueden 'ver­ ciar subespecies en Schistosoma · manso ni, Schisc cas también se basan en técnicas de DNA teéombi­
zimas necesarias para el proceso. se con el microscopio fluorescente. En tinciones tosoma japonicum y Sclzistosoma haemato:•ium, nante, se ha demostrado que la protección obtenida
46 PARAS/TOLOGIA MEDICA BIOQUIMICA YBIOLOGIA MOLECULAR DE PARASITOS 47

contraP/asmodiumfalciparum en animales inyecta­ mo al huésped. Esto podría atribuirse a la existencia contenido del glucógeno de los parásitos; esto pue­ rrollo de compuestos activos en contra del parásito,
dos con esporozoítos irradiados, está correlacionada de diferencias bioquímicas entre el parásito y el hués­ de deberse a una disminución de la síntesis o a un sin afectar los procesos metabólicos normales del
con la presencia de anticuerpos contra una proteína ped. Por otra parte, ciertas drogas que se ingieren aumento de la degradación del polisacárido, sugi­ huésped. Un aspecto poco estudiado en parásitos
de superficie del parásito, la llamada proteína del oralmente alcanzan una alta concentración en el in­ riendo que el efecto de estas drogas es completa­ es la existencia de enzimas de detoxicación, capaces
circumsporozoíto. testino donde son activas contra un parásito, pero mente distinto al de los antimoniales trivalentes. de transformar drogas antiparasitarias en compues­
no afectan al huésped porque no se absorben a tra­ Recientemente, ciertos insecticidas orgarnofosfo­ tos inactivos. Estas enzimas podrían ser responsa-
Farmacología bioquímica vés de la pared intestinal. rados se están utilizando como antihelmínticos. Com­ "' bles, por lo menos en parte, de la resistencia a drogas
de drogas antiparasitarias La piperazina produce una parálisis de la muscu­ puestos tales como diclorvos (2, 2-diclovinildime­ que se observa en ciertos parásitos, particularmente
latura en áscaris sin provocar un bloqueo neuromus­ tilfosfato) y vincovos (2,2-diclorometilbutilfosfato), T1ypanosoma cruzi.
En general, la quimioterapia de las enfermedades cular en el huésped. La parálisis muscular en el pará­ que actúan como nematocidas y cisticidas, proba­
parasitarias se basa en el ensayo indiscriminado de sito se acompaña de una dism.Ínución acentuada en blemente ejercen su efecto a través de la inhibición Perspectivas futuras
numerosas drogas con la esperanza de que alguna la producción de succinato, pese a que las reaccio­ de la acetilcolina esterasa de los parásitos.
sea efectiva. Cuando esto ocurre, se preparan todos nes enzimáticas que llevan a la síntesis de este meta­ Ciertas diferencias metabólicas entre parásito y Los primeros estudios importantes de la bio­
los derivados imaginables y se ensayan en las condi­ bolito no son afectadas. Es posible que la fosforila­ huésped han sido utilizadas para el desarrollo de química de parásitos se remontan a 1901 (Wein­
ciones más adecuadas. El proceso es largo y costoso ción acoplada a la producción de succinato vía la drogas antiparasitarias. Un ejemplo interesante es land, 1901 ). Pese al largo tiempo transcurrido, esta ,¡
y sólo las grandes empresas farmacéuticas o institu­ reducción de fumarato en presencia de NADH, sea el del T,ypanosoma cruzi que, a diferencia de los disciplina no se ha desarrollado como ha ocurrido i
tos de investigación subvencionados por los gobier­ importante en el efecto de piperazina. De esto puede mamíferos, no puede sintetizar purinas de novo. El con otras ramas de la bioquímica. Numerosos as­
nos de países desarrollados pueden realizar este tipo concluirse que sustancias que interfieren en la pro­ alopurinol (4-hidroxipirazolo 3,4-d pirimidina) y pectos del metabolismo de hidratos de carbono de
de ensayos. ducción de ATP durante la conversión de fumarato a análogos inhiben el desarrollo de las formas de cul­ parásitos necesitan clarificarse. Lo mismo ocurre
El conocimiento preciso de las vías metabólicas succinato en condiciones anaeróbicas, podrían te­ tivo del parásito, pero no tiene efectos tóxicos para con el transporte de electrones. Esencialmente no
y de sus etapas intermediarias en parásitos podria ner un efecto antihelmíntico. Los compuestos, tales el hombre. La toxicidad diferencial se explica por­ existe información que pueda considerarse dentro
permitir un enfoque más eficiente y científico, es como biclorosalicilamida (Yomesan®), desaspidina que el parásito metaboliza el compuesto, mediante de los conceptos de la bioquímica contemporánea
decir, la denominada quimioterapia racional. Esto (un derivado de floroglucinol) y el diclorofeno son una conversión secuencial, a allopurino ribonucleó­ acerca del metabolismo de lípidos y de la síntesis
se basa en la posibilidad de inhibir alguna etapa parecidos desde el punto de vista estructural, al dini­ sido monofosfato y 4-aminopirazolo 3,4-d mono-, de proteínas. Felizmente la aplicación de técnicas
metabólica esencial del parásito sin que se afecte trofenol, un desacoplante de la fosforilación oxidati­ di-, y trifosfato. Este último se incorpora en el ácido derivadas de la biología molecular a múltiples as­
una secuencia similar en el huésped; para este efec­ va, y el efecto antihelmíntico de estas drogas puede ribonucleico del parásito: Un fenómeno similar ocu­ pectos del metabolismo de parásitos está contri­
to se requiere una información íntima acerca del mo­ deberse a una acción desacopladora de la síntesis de rre en leishmanias patógenas y en formas de cultivo buyendo a un conocimiento más preciso y profun­
saico enzimático del parásito, la sensibilidad de las ATP. y sanguíneas de tripanosomas africanos. En con­ do de fenómenos tan diversos como la regulación
enzimas o inhibidores y una información adecuada Ciertos derivados antimoniales trivalentes son traste, el alopurinol es transformado a oxipurinol y metabólica, ta· estructura de proteínas antigénicas
acerca de la cinética y de la estructura proteica de efectivos en el tratamiento de la esquistosomosis y parcialmente excretado en mamíferos. Lamentable­ y enzimáticas, la topología de las proteínas de
ellas. La revisión que hemos hecho en este capítulo parecería que el efecto se debe a la inhibición de mente se han encontrado numerosas cepas y espe­ membrana y la participación de residuos lipídicos
indica que estamos muy lejos para una quimiotera­ una sola enzima, la fosfofiuctoquinasa. La inhibi­ cies de tripanosomátidos refractarios al alopurinol y de carbohidratos en el anclaje de estas proteínas
pia racional. ción es de tipo competitivo y se revierte por fiucto­ y sus análogos. a las membranas. La aplicación de técnicas de iri­
Las razones de nuestro atraso en el conocimiento sa-6-fosfato, uno de los sustratos de la enzima. El Ciertas drogas como el ketoconazol de acción geniería gep.ética al aislamiento de proteínas cla­
bioquímico de los parásitos, en relación con las bac­ efecto de fructosa-6-fosfato sería por competencia antimicótica, son capaces de inhibir el desarrollo ves en las reacciones metabólicas del parásito,
terias y virus, son numerosas. Desde el punto de por un mismo sitio activo de la enzima que la hace de Trypanosoma cruzi. El ketoconazol y itracona­ permitirá la obtención de grandes cantidades de
vista práctico, muchas veces el material parasitario más susceptible a la acción de los antimoniales tri­ zol interfiere con la demetilación del lanosterol en material, susceptible a la cristalización y análisis
es escaso o los parásitos son dificiles de cultivar o valentes. La posibilidad de que los antimoniales posición 14 alfa, una reacción catalizada por el cito­ de estructura, lo que antes era casi imposible de
simplemente no se desarrollan in vitro. Esto es parti­ actúen sobre los grupos SH de la fosfofructoquina­ cromo P-450. La administración de ketoconazol a realizar debido a las limitaciones en la obtención
cularmente importante en helmintos parásitos. En sa se descarta, ya que el efecto inhibitorio es inclu­ cultivos del parásito produce una acumulación de de parásitos. El análisis computacional de estas
otras ocasiones, los ciclos evolutivos son complejos so mayor en presencia de sustancias protectoras de 24-metilen-dihidrolanosterol, que es una 4, 4, alfa­ estructuras cristalinas permitirá, en un futuro no
y largos y no se conocen con precisión, como ocu­ grupos SH, tales como cisteína, glutatión o beta­ esterol. A raíz de este bloqueo en la síntesis de lejano, el diseño de drogas específicas que podrán
rría hasta hace poco con el huésped definitivo del mercaptoetanol. esteroles, la membrana del parásito no se constitu­ utilizarse en el tratamiento de las parasitosis. La
Toxoplasma gondii. Otros compuestos, tales como el cloruro de tris ye en forma apropiada. El efecto de la droga se alianza de la biología molecular con la bioquímica
Los agentes antimicrobianos interfieren en las (p-aminofenil) carbono (p-rosaniiina) producen pará­ explica porque el parásito contiene citocromo P- y la inmunología moderna, abre posibilidades ili­
reacciones biosintéticas inhibiendo en esta forma el lisis del músculo que permite a los esquístosomas 450 específico para la demetilación en posición 14 mitadas en el estudio de los grandes tópicos del
desarrollo bacteriano. Sin embargo, como los helmin­ fijarse a la mucosa intestinal. Esta parálisis se re­ alfa de esteroles. parasitismo que eventualmente resolverá los pro­
tos parásitos son organismos de crecimiento relati­ vierte in vitro por agentes anticolinérgicos como la El nifurtimox y el benznidazol, dos drogas que se blemas de diagnóstico y tratamiento enfrentados
vamente lento, son esencialmente refractarios a inhi­ atropina. La acetilcolina produce depresión de la han usado para tratar la enfermedad de Chagas actua­ por el parasitólogo clínico. Es de esperar que las
bidores del crecimiento. Sin embargo, desde un pun­ actividad muscular de esquistosomas, por lo que el rían produciendo radicales libres y agentes electrofi­ nuevas generaciones de parasitólogos aprovechen
to de vista teórico, los helmintos podrían ser afecta­ efecto de agentes anticolinérgicos sugiere que la licos. El parásito es más sensible que el huésped a esta magnífica oportunidad para contribuir al co­
dos por drogas que interfieran con sus sistemas mus­ parálisis es causada por la acumulación de acetilco­ estos agentes. nocimiento de la biología del parásito, utilizando
culares o que inhiban las reacciones esenciales de lina endógena, producida por la inhibición de ace­ De estos pocos ejemplos se desprende que el co­ un enfoque multidisciplinario en el que se mezcle
las que derivan •su energía. :..,,,e; .. ,.,·.. tilcolinesterasa; Niridazolel -(5-nitro-2-tiazolil)-2- nocimiento adecuado de las reacciones bioquímicas armoniosamente la bioquimica,Ja biología mqlecu­
La mayoría ·de los antihelmínticos son bastante imidazolidona, parece inhibir la fosforilasa dél es­ de los parásitos y una correlación con los efectos lar, la inmunología y la ingeniería genética.
específicos para el parásito, afectando en grado míni- quistosoma, acompañada de una disminución del farmacológicos de drogas, podría conducir al desa-
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Capítulo 3
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PARASITOLOGIA MEDICA

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Hill, 1966.

Para los endoparásitos el hospedero representa se les denomina indistintamente como huéspedes,
todo su medio ambiente, puesto que en él desarro­ hospederos, hospedadores o mesoneros. Muchos
lla su actividad vital para sobrevivir y reproducirse. parásitos alcanzan a su hospedero en forma pasiva,
Los estadios de huevos, larvas o quistes que se en­ principalmente por vía oral, mediante la transmisión
cuentran por un tiempo variable fuera del hospede­ de huevos o quistes contenidos en alimentos o fomites.
ro, no son sino etapas del desarrollo que no invalidan A su vez, una amplia variedad de estadios larvales
el aserto anterior. Sin embargo, a pesar de esta franca de helmintos deben buscar activamente a su hospe­
diferencia de ambiente de los parásitos con los ani­ dero adecuado. Entre las larvas de Digenea, los
males de vida libre, se puede establecer, primaria­ miracidios y las cercarías presentan· una muy sensi-.
mente, ciertas analogías entre estos dos modos de ble respuesta a los estímulos físicos del ambiente,
vida. En los hábitat del hospedero, los parásitos gracias a sus estructuras sensoriales (manchas ocu­
ocupan y están adaptados a determinados nichos lares y papilas dérmicas). El miracidio, larva acuá­
ecológicos, de la misma manera como los anima­ tica de corta vida, busca al hospedero apropiado
les de vida libre se adaptan a determinados nichos atraído por la secreción de moco del caracol e, igual­
del ambiente externo. Y, por otra parte, si bien todo mente, en las cercarías se ejercería un fenómeno de
el ambiente del parásito es de origen biótico, pues­ quimiotaxis, sea para enquistarse en plantas acuáti­
to que es provisto por un ser vivo, ese ambiente cas (Fasciola hepatica) o para penetrar activamente
está constituido por componentes primarios que a su hospedero (Schistosoma sp.). Sin embargo, no
son abióticos tales como pH, tensión de oxígeno, existen, a este respecto, estudios extensos y es pro­
potencial redox y disponibilidad de nutrientes, ade­ bable que en esta búsqueda del hospedero apropia­
más de los verdaderos componentes bióticos como do también influya un proceso azaroso de tentativa
,•
son la presencia de· otros parásitos o de micro­ y error.
organismos; es decir, en un contexto análogo a los En el caso del coracidio, larva acuática ciliada de
animales de vida libre. los cestodos Pseudophyllidea, el proceso es pasivo,
Sin embargo, estas analogías ecológicas tienen puesto que esta larva forma parte del plankton que
un quiebre franco con una eventualidad a la cual no sirve de alimento para los pequeños crustáceos
están sometidos los animales de vida libre: el am­ (copépodos) que actúan como hospederos interme­
biente que el hospedero provee al parásito no es diarios. Y en relación con las larvas de algunos gé­
pasivo, sino que reacciona adaptativamente frente a neros de Nematoda que penetran por la piel
su presencia. En efecto, los parásitos deben encarar (Ancy/ostoma, Strongyloides) es probable que en la
una serie de factores potencialmente destructores, búsqueda activa de su hospedero, también interven­
como por ejemplo, la presencia de anticuerpos, com­ ga una atracción química sobre sus estructuras sen­
ponentes del complemento, citotoxinas, enzimas liso­ soriales.
somales, además de la acción depredadora de célu­ U na vez encontrado el hospedero, _estos esta­
las fagocitarías. En último término, la capacidad del dios larvales deben procurar penetrarlo activamente,
parásito para evadir o resistir esas respuestas adap­ para lo cual utilizan vigorosos movimientos del cuer­
tativas del hospedero, es la que determinará su éxito po. Los miracidios se valen, además, de sus glándu­
para sobrevivir como individuo y como especie. las apicales, cuya secreción lubrica y contiene enzi­
mas líticas (logrado el intento, la larva pierde su
MECANISMOS PARA LOCALIZAR cubierta ciliada). Algo similar ocurre con las cerca­
Y PENETRAR AL HOSPEDERO rías, gracias a la acción de sus glándulas acetabula­
_I
res. En el caso de las larvas de nematodos, también
Prácticamente todos los seres vivos, animales y ayudan las enzimas líticas, aunque no.está esc;!¡¡re­
vegetales, pueden albergar parásitos y, por lo tanto, cido su mecanismo de acción.
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El HOSPEDERO. LA RELACION HOSPEDERO-PARAS/TO 51


5-0 PARASITOLOGIA MEDICA

ESTABLECIMIENTOY CRECIMIENTO protector. La eclosión en estos casos, por ejemplo, HUESPED


EN EL HOSPEDERO en los huevos de Taenia es bifásico: la oncosfera INFECTADO
es activada en el tubo digestivo del huésped inter­
El establecimiento y crecimiento de los parásitos mediario, abomba la membrana que lo cubre y las
requiere superar una serie de barreras que le presen­ enzimas proteolíticas del hospedero y tal vez las
ta el hospedero. Desde luego existe una barrera sales biliares, digieren la cápsula externa, liberando
abiótica dependiente de las condiciones fisiológicas, el embrión hexacanto. Las formas larvales quísticas
del hospedador, y representada por las facilidades (cisticercos, etc.), son liberadas en el tubo digesti­
que ofrezca para la ruptura y desenquistamiento de vo del hospedero definitivo, para lo cual requieren
hUC\'OS
los huevos y de los quistes infectantes, y por el pH, de las enzimas digestivas y sales biliares. quistes
temperatura, tensión de oxígeno, presión osmótica y En el ciclo evolutivo de los nematodos, hay hue­ oaquistes
otras condiciones del medio interno. No menos im­ vos que eclosionan en el medio externo y otros lo AMBIENTE esporoquistes
portantes son las barreras bióticas relacionadas con hacen en el tubo digestivo del hospedero. En aque­
el estado inmunitario del hospedero, como son la llos que liberan larvas infectantes en el exterior
presencia de inmunoglobulinas, componentes del (Ancylostoma, Strongy/oides), a la acción de estí­
complemento y la acción depredadora de las células mulos ambientales (agua, temperatura, pO,, etc.), se
fagocitarias. suma la liberación de enzimas por parte de la larva,
(
1
DESENQUISTAMIENTO Y LIBERACION
pennitiendo la entrada de agua y aumento de la pre­
sión hidrostática dentro del huevo, con la consiguiente FECALISMO FECALISMO
DE FORMAS INFECTANTES liberación del estado larval. En el tubo digestivo, el HUESPED
huevo de Ascaris, bajo condiciones favorables en SUSCEPTIBLE
Otro problema que les toca enfrentar a los quis­ pH, pCO, y temperatura, la larva encerrada en su
tes y huevos, es el oportuno desenquistamiento y interior se activa y produce enzimas capaces de di­
liberación de las formas infectan tes. Los estudios in gerir las capas de ascarósido y quitina, lo que deter­
vitro indican que algunos factores, como temperatu­ mina la eclosión del huevo. Figura 3-1. Ciclo evolutivo directo o monoxénico de parásitos. El hospedero infectado elimina al medio externo las
ra, P,CO,, pO,, pH y la presencia de enzimas pro­ fonnas infectantes para su paso al hospedero susceptible.
teolíticas, son necesarias para el desenquistamiento. MECANISMOS DE TRANSM!SlON
Entre los protozoos, el desenquistamiento de los DE PARASITOS Y SUS CICLOS EVOLUTIVOS de continuar su desarrollo a parásito adulto, se ha­
quistes de Entamoeba histolytica se produce por la ambiente las formas infectantes de los parásitos
para su paso al hospedero susceptible (Figura 3-1). bla de hospedero paraténico o transportador.
acción de las enzimas pancreáticas y una temperatu­ El parasitismo se sustenta en el éxito que pueda El concepto de hospedero definitivo se relaciona
ra mayor que la del medio externo, pO, bajo y pH tener el traspaso de parásitos de un hospedero a otro Este tipo de ciclo ocurre en algunos �ctoparásitos
y en los parásitos intestinales que se traqsmiten por con el ciclo evolutivo del parásito y se refiere, como
neutro o alcalino. En los quistes de Giardia, es favo­ lo cual, habitualmente, es muy complejo. Desde lue­ ya se explicó, .al hospedero en el cual el parásito
·
rable la sucesiva exposición a la acidez gástrica y la go, la transinisión no es posible si el parásito no ha fecalismo· (protozoos y geóhelmintos); menos co­
mún son otros medios de transmisión, como el adquiere el estado.. adulto; por lo tanto, no es. "defi­
•' brusca elevación del pH cuando pasa al intestino alcanzado un detenninado estado de desarrollo que nitivo" en el sentido cronológico. En triquinosis, un
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¡_:¡ ·' delgado. Y en los coccidios, se ha observado que se conoce como forma infectan/e. Este estado infec­ contacto sexual, la infección congénita o la infec­
ción iatrogénica (transfusiones, trasplantes de ór­ mismo animal es primero hospedero definitivo, por­
¡i.:I actúan la bilis y la pepsina sobre toda la superficie tante puede llegar a su hospedero en forma activa, que alberga helmintos adultos en el intestino y des­
del ooquiste o sobre la porción más adelgazada de la por ejemplo, por la piel, como ocurre con los es­ ganos, etc.).
::¡ pared (cuerpo de Stieda) con la consiguiente libera­ tadios larvales de ·esquistosomas, uncinarias, estron­ En los ciclos evolutivos indirectos o heteroxé­
nicos, los parásitos necesitan pasar por dos o más
pués es hospedero intermediario, cuando, en una
etapa ulterior, alberga a las larvas en su musculatura.
1 ción del esporoquiste. giloides, etc., o en fonna pasiva mediante la inges­
1! hospederos de distinta especie para alcanzar su ple­
En Digenea deben liberarse los estadios ence­ tión de huevos, quistes o estados larvales, y por ino­
rrados en los huevos y en las metacercarias. Los culación por insectos hematófagos. El lugar de in­ no desarrollo. Así, se distinguen hospederos defi­ ACCION PATOGENA DE LOS PARASITOS
huevos eclosionan en el agua bajo condiciones greso en el hospedero constituye la vía de infección nitivos y hospederos intermediarios. El hospede­
ro definitivo es aquel en el cual el parásito se re­ Los parásitos pueden producir daño a su hospe­
ambientales favorables, especialmente la tempera­ (digestiva, respiratoria, cutánea) y el modo o cir­ dero mediante diversas acciones.
tura, la salinidad y la luz solar. Los requisitos para cunstancias por las cuales ingresa, son los mecanis­ produce sexualmente, como ocurre con muchos
helmintos y en los protozoos Apicomplexa. El Acción expoliatriz o sustractora. Expolian o sus­
el desenquistamiento de las metacercarias en el mos de infección. La localización en un detenuinado traen nutrientes del hospedero. La anemia de algu­
interior de su hospedero, varia según el grosor de sistema u órgano, donde el parásito se instala y hospedero intermediario es el que alberga las for­
mas larvales de los helmintos o los estadios de nas parasitosis se explica por sustracción de vitami­
su envoltura: en aquellos con pared quística delga­ multiplica, se denomina hábitat. na B l 2 (Diphyllobothr:iwn latum) o por acción
da, se _necesita el aumento de temperatura aportado El conjunto de etapas y transformaciones que multiplicación asexuada de los protozoos Api­
complexa (Figura 3-2 ). hematofágica (Ancylostoma duodena/e, Triclwris
.·i por el hospedero homeotermo; pero en meta­ experimenta un parásito dµrante su desarrollo, se
En los protozoos con dos o más hospederos y trichiura). En general, todos los parásitos ejercen,
cercarías con envolturas quísticas complejas, como conoce como ciclo evolutivo o ciclo biológico. Estos de alguna manera, cierto grado de acción expoliatriz,
ocurre en Fasciola hepatica, es necesaria la con­ ciclos pueden ser directos o monoxénicos si el pará­ sin estadios de multiplicación sexual de desarrollo,
currencia de aumento de la temperatura, elevación no se puede distinguir hospederos intermediarios o la cual si es muy intensa, puede causar o agravar una
sito requiere de un solo hospedero para todo su de­ desnutrición.
de pCO" y la presencia de sales biliares. sarrollo e indirectos o heteroxénicos si necesita dos definitivos. Como en estos casos existe una rela­
ción artrópodo-mamífero, se habla de hospederos Acción traumática. Producida por helmintos
En los cestodos, si bien los huevos de los Cyclo­ (dioxénicos) o más mesor:iefos (pblixénicos).
phyllidea poseen una delgada pared externa, la on­ Los ciclos directos o monoxénicos son sim­ invertebrados y vertebrados. Cuando en un hos­ que migran y lesionan tejidos, como la fasciola
pedero se desarrolla un estado larval, pero no pue- durante su migración por el hígado, como el áscaris
cosfera está encerrada en un embrióforo grueso y ples: el hospedero infectado transfiere al medio
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52 PARASITOLOGIA MEDICA f 53
El HOSPEDERO. LA RELACION HOSPEDERO-PARAS/TO

HUESPED ral, se van eliminando los más susceptibles y a la y arasitólogos clínicos somos una minoría. Cierto es
DEFINITIVO larga, cuando el proceso de selección opera sobre que estos pocos pudiéramos influir para t17;t�r de
CARNIVORISMO parásitos y hospederos, llegan a predominar las cambiar el lenguaje diario de nuestros med1cos,
adultos AMBillNTE
infecciones inaparentes, atenuadas o subclínicas. arraigado por la tradición y que permite el mutuo
Cada factor enumerado tan escuetamente traza entendimiento. Por lo tanto, la tarea es dificil Y no
el perfil de la enfermedad parasitaria y son estudia­ creemos que pese a nuestros esfuerzos, se logre un
dos en profundidad a lo largo de este libro. éxito rotundo, lo cual apoya nuestra posición
ecléctica.
LA NOMENCLATURA DE LAS PARASITOSIS
CLASIFICAClON CLINICA
l. Existe gran heterogeneidad en la denominación DELASPARASlTOSIS
11
1
AMBIENTE de las parasitosis debido a la falta de un sistema
único y universal en los nombres de las infecciones Hay diversas clasificaciones clínicas de las para­
y enfermedades parasitarias. sitosis las cuales si bien son imperfectas, ayudan a
Al respecto, el consejo de la Federación Mundial fáciles esquemas prácticos. El criterio de clasifica­
de Parasitólogos (FMP), acordó en 1991 promover la ción puede atender a la morfología de los parásitos,
uniformidad en la denominación de estas afecciones grado del parasitismo, localización topográfica o su
FECALISMO y, para ello, aprobó la nomenclatura estandarizada de ubicación en sistemas y órganos.
larvas
las enfermedades parasitarias animales publicadas
HUESPED en 1988 por la Asociación Mundial por el Avance de Según la morfología del parásito:
INTERMEDIARIO la Parasitología Veterinaria. La FMP y la Federación a) Protozoosis.
de Parasitólogos Europeos apoyaron estos princi­ b) Helrnintosis.
pios, haciéndolos extensivos a todas las infeccio­ c) Artrópodos.
Figura 3-2. Ciclo evolutivo indirecto o heteroxénico de parásitos con dos o más hospederos .de distinta nes, sean del hombre o de los animales, y propició La significación de estos grupos ya ha sido estu-
especie
(hospederos definitivos e intermediarios). la formación de la SNOPAP (Standardized Nomen­ diada anteriormente:
clature of Parasitic Diseases) invitando a adoptar
sus resoluciones a los parasitólogos de todo el Según su grado de parasitismo:
mundo. a) Parasitosis temporarias o facultativas.
errático o larvas de nematodos en su paso por el hospedero alberga parásitos. Sin embargo, a menu­ Prácticamente todas las dificultades nacen de la b) Parasitosis permanentes y obligatorias.
pulmón. También hay acción traumática en la sama do el hospedero no sufre daño; es decir, se produce variación en los nombres de las infecciones o enfer­ La mayoría de los parásitos deben necesariamen­
y, en general, las lesiones ocasionadas por insectos un estado de comensalismo con este ser asociado. Si
hemátofagos. medades que terminan en los sufijos -osis -asís o - te vivir gran parte de su desarrollo en su hospedero,
el hospedero presenta signos y síntomas como con­ iasis. El interés no sólo es semántico. Dado el pro­ porque perecen rápidamente al estado libre; son
Acción obstructiva o mecánica. Muchas veces· secuencia del parasitismo, se habla de enfermedad greso de las comunicaciones, es necesaria la unifor­ parásitos obligados o permanentes. Sin embargo,
producidas por gran cantidad de parásitos (obstruc­ parasitaria. midad que evite el caos, resuelva sobre los nombres algunos artrópodos hematófagos, como la pulga, sólo
ción intestinal por áscaris), quistes hidatídicos en La relación hospedero-parásito constituye una de las parasitosis en diferentes idiomas y ponga or­ parasitan por momentos al hospedero, permanecien­
diversos órganos, o en la neurocisticercosis. infección o una enfermedad, según la influencia de den en los "key words" o palabras claves de la base do gran parte de su existencia como insectos de vida
Acción tóxica. Ejercida por metabolitos inter­ factores dependientes de uno y otro asoci_ado. de datos de la computación e informática. libre; es decir, se trata de un parásito facultativo o
mediarios del parásito que pasan a ser lesivos para Los factores del parásito están condicionados por Lo que concretamente se propone para conse­ temporario.
el hospedero, como ocurre con la fiebre en la ma­ la o las cepas, virulencia, el númerb, su tropismo
laria. La Fascio/a hepatica secreta prolina, que guir estos fines, es lo siguiente: !) de los tres sufijos
especial por determinados órganos y tejidos, etcé­ (-osis, -asis, -iasis), sólo debiera usarse el sufijo -asís Según la topografía:
provoca reacciones celulares en los conductos bilia­ tera.
res y fibrosis hepática. (plural -oses); 2) el sufijo -osis debe agregarse al a) Ectoparasitosis
Los factores del hospedero dependen de la edad taxón del nombre del parásito, lo que habitualmente b) Endoparasitosis
Acción inmunoalérgica. Igual que la anterior, (generalmente los animales jóvenes son más sus­ se logra con la omisión de la última o de las dos Los ectoparásitos se ubican en la superficie del
pero en un hospedero sensibilizado, lo que explica el ceptibles), la raza (distinta susceptibilidad de blan­ últimas letras; 3) en algunos casos, el nombre de la cuerpo; generalmente corresponden a artrópodos. Los
shock anafiláctico del quiste hidatídico roto a serosas, cos y negros en la malaria), el sexo (absceso hepá­
los pruritos, urtic¡¡rias, edemas, granulomas, fibrosis, enfermedad se forma agregando el sufijo -osis al endoparásitos viven en el interior del organismo.
tico amibiano más frecuente en el hombre), la sus­ nombre completo del taxón del parásito (ejemplo,
inducción de auto-anticuerpos, etcétera. ceptibilidad y estado inmunitario ( enfermedades
En la práctica cada p¡uásito ejerce su acción /oasis); 4) los nombres de enfermedades bien esta· Según su localización en sistemas y órganos:
concomitantes, SIDA, etc.), del estado nutritivo (el blecidas seguirían iguales como, por ejemplo, mala­ a) Enteroparasitosis
patógena combinando estos u otros mecanismos de desnutrido hace infecciones más severas), su consti­ ria, enfermedad de Chagas, hidatidosis, larvas mi· b) Histoparasitosis
daño al hospedero, el cual reaccionará según su sus­ tución genética, etcétera. grantes, myiasis, sarna. c) Hemoparasitosis
ceptibilidad y estado inmunológico. La constitución genética del hospedero desem­ Apoyarnos estas proposiciones dadas sus ob· d) Ectoparasitosis
peña un papel importante en la patogenia de la in­ vias consecuencias, pero con algunos alcances que Clasificación muy usada y que indica parasitación
INFECCIONY fección-enfermedad parasitaria, pues determina su
ENFERMEI;>ADPARASITARlAS nos parecen igualmente atendibles. En medicina del tubo digestivo, tejidos, sangre y piel, respectiva­
e.ursa y,se.veridad. Cuando un hospedero es parcial­ · humana, el manejo .de las enfermedades parasita-. - . mente.
mente resistente, la infección es menos severa que rias es patrimonio de todos los médicos y los
Se habla de infección parasitaria cuando un si fuera altamente susceptible. Por selección natu-
r
PATOLOGIA GENERAL DE LAS PARASITOSIS 55
Capítulo 4

PATOLOGIA GENERAL DE LAS PARASI TOSIS


RODOLFO CESPEDES*

El anatomopatólogo, especialmente en Latino­ de un platelminto (debe considerarse que los


américa, cada vez que se enfrenta al estudio de una ·patólogos trabajamos en cortes histológicos). El
pieza, quirúrgica o no, debe tener en su ánimo la reunir más casos y consultar la opinión de expertos,
idea de encontrarse con una enfermedad parasita­ tomó años. Fue el oportuno consejo del profesor Dr.
ria. Hay muchos ejemplos de situaciones como ésta, Beaver lo que nos puso en la ruta de buscar un
pero quizás uno de los más gráficos es el de la posible nuevo helminto, no descrito aún en la litera­
angiostrongilosis. Por años, en los servicios de pa­ tura; gracias a esta ayuda, después de más de quince
tología recibimos piezas operatorias que compren­ años de estudio, al fin fue posible redondear un con­
dían el ciego, apéndice, parte del íleon y ganglios cepto clínico, anatómico y parasitológico de lo que
linfáticos regionales, los cuales eran producto de llamamo "granulomas entéricos y linfáticos con
Í'. cirugías de urgencia, hechas en hospitales de pro­ intensa eosinofilia, producidos por un strongilídeo".
j! vincia, en casos de oclusión intestinal. Dichas pie­ Años después, se le llamó angioestrongilosis abdo­
1 zas venían con el diagnóstico clínico de tumor, ge­ minal, y ahora, sabemos que es extraabdominal tam­
neralmente sospechado como linfoma intestinal o bién, pues han aparecido casos con necrosis testicular
carcinoma. Mici-oscópicamente el hallazgo más sig­ y lesión de la arteria espermática, y en el último
nificativo era el engrosamiento de la pared intesti­ tiempo, en un caso típico de angioestrongilosis in­
nal y su rigidez, a veces con úlceras en la mucosa, testinal, se encontró un granuloma con huevos de
una fina reacción peritoneal de tipo microgranular Angiostrongy/us en el espesor de músculos rectos
y linfoadenopatía considerable. La sorpresa de la pared abdominal.
histológica era la ausencia de tumor y la infiltración Otro de los problemas difíciles de resolver es
eosinofilica masiva del tejido, con presencia de al­ cambiar los procedimientos de rutina establecidos
gunos macrófagos y, a veces, células gigantes mul­ en las salas de operaciones: usualmente, y más en las
tinucleadas. En algunos casos, aparecían en el teji­ provincias,. las piezas quirúrgicas van a un frasco
do huevos muy semejantes a los de uncinaria, pero con fijador y ahí permanecen por días o semanas; el
de dimensiones diferentes, levemente mayores. disecar luego un tejido fijado, tratando de extraer un
Andando los años, apareció un caso, con un frag­ helminto de un vaso, es tarea casi imposible. Se hace Figura 4-1. (A) Cráneo abierto que pennite ver una larva de Dermatobia hominis emergiendo de la corteza cerebral
mento de material hialino que se interpretó como necesario, mediante educación y convencimiento, (flecha); el parásito está rodeado por una placa de meningitis focal. Hacia la derecha, otra flecha indica un orificio en
parte de la pared de un helminto. Los cortes seriados
no permitieron resolver el problema. Cuando en
conseguir que el personal profesional y auxiliar de
los hospitales colabore, enviando los especímenes ·--, la cara inferior de la piel por donde la larva pasó. {B) Fragmento de hueso parietal con el orificio que la larva hizo al
penetrar. {C) Trombosis del seno longitudinal en un caso severo de uncinariasis y tricocefalosis, con desnutrición. {D)
otro caso, logramos encontrar una estructura que sí sin fijar y avisando oportunamente a los servicios de Biopsia de cerebro con huevos de Parago11i11111s y proceso inflamatorio difuso.
correspondía a la de un fragmento de helminto, patología de su existencia.
vino la discusión de si se trataría de un nematodo o Otro ejemplo actual lo dan los servicios de
neurocirugía que se van organizando en hospitales presores, a veces sin control parasitológico previo; parasitados por helmintos y conforme crecen los
• El profesor Dr. Rodolfo Céspedes. destacado médico costarri� regionales: se opera un caso con la sospecha clínica hemos tenido asi casos mortales por diseminación cinturones de miseria en nuestras ciudades, peor
cense recientemente fallecido, fonnado como nnatomopatólogo de tumor encefálico; en la biopsia transoperatoria, de estrongiloidosis, malaria, o incremento severo de será esta situación, la que no puede ni debe sernos
y pamsitólogo en Chile, emprendió una exitosa labor de enseñan­ resulta un proceso inflamatorio con eosinofilia y lesiones leislunaniósicas cutáneas pequeñas. indiferente a los médicos.
za e investigación en medicina tropical reconocida en su país y presencia de huevos de Paragonimus sp. (Figura Ningún tejido de la economía deja de estar ex­ Las enfermedades producidas por parásitos son
toda Centroamérica. Su disposición a In enseñanza, la generosi­ 4-10). puesto a la acción de un parásito, pero éste hay que capaces de ocasionar cambios tisulares muy varia­
dad para compartir su enorme competencia científica, la forma­ dos, que pueden simular cualquier síndrome de la
Podriamos multiplicar los ejemplos, pero lo im­ buscarlo con tenacidad. Los médicos jóvenes van
ción de innumerables discípulos y su especial sensibilidad social patología general. La morfología de las lesiones se
por las clases más desposeídas de América Lntina, lo hacen portante es darse cuenta de que, conforme los médi­ echando al olvido las parasitosis, porque se sienten
merecedor ni reconocimiento de verdadero Maestro. Su invaluable cos usan métodos exploratorios más agresivos, los atraídos por computadoras y otros equipos moder­ modifica según la duración del cuadro clínico y de
contribución n las tres ediciones de la "Parasitología Clinica" ha patólogos debemos estar alertas y dispuestos a en­ nos de trabajo. Los educadores en ciencias de la su evolución; así, una colitis aguda amibiana puede
,¡ tener úlceras necróticas y si el proceso se apaga, con

J
recibido el reconocimiento de todos. Como homenaje a su me­ contrar enfermedades parasitarias, aunque la clínica, salud debemos insistir en la importancia que tiene
moria, reproducimos este capítulo de Patología General de las . _por razones obvias, lo que más. bll.sca son tumQtes. ,.. para nuestros pueblos que los médicos. sepan para­ o sin tratamiento, puede pasar a ser, una enfermedad
Parasitosis, aparecido en la tercera edición de esa obra. Su acer­
Otro hecho actual que debemos tener presente, "I sitología. Como bien lo demostró Apt, tenemos en crónica, larvada y recidivante; situaciones similares
tado enfoque del tema sigue siendo un clásico en In literatura vemos en tripanosomosis americana, leishmaniosis
los patólogos, es el uso que se hace de inmunosu- América Latina más de 200 millones de habitantes
científica.

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56 PARAS/TOLOGIA MEDICA PATOLOG/A GENER1IL DE LAS PARASITOS/S 57

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Figura 4-3. Ascariasis. (A) Corte de hígado en cuyos conductos biliares se aprecian fragmentos de un Ascaris adulto.
(B) Conducto biliar dilatado con severa colangitis; se aprecia necrosis del tejido y abundantes huevos de Ascaris en el
exudado; una sección del helminto aparece en el ángulo superior derecho. (C) El mismo caso de A y B donde se aprecia
un émbolo de huevos de Ascaris en una rama de la arteria pulmonar.

inicial de una enfermedad y luego desaparece, para NECROSIS


que el cuadro clínico impresionante sea dado por una
complicación bacteriana, por ejemplo; así sucede en Constituye una de las lesiones más graves en las
algunas apendicitis, iniciadas por la acción de un enfermedades parasitarias y puede comprometer
oxyuro, tricocéfalo o amiba y seguida de una perfo­ cualquier territorio. Existen numerosos ejemplos de
ración con peritonitis aguda purulenta, o trom­ su producción: así, en las etapas iniciales de la
boflebitis; al final, el estudio patológico del espéci­ amibiasis intestinal, la mucosa se necrosa sin caer,
men lo que menos pennite es encontrar al pri111w11 es decir, antes de que aparezca la ulceración (Figura
Figura 4-2. Amibiasis . (AJ Mucosa colónica necrótica pero no ulcerada; trofozoitos de E11ta111oeba histo(vtica sobre la movens del proceso, que fue un parásito; similares 4-2A); pueden verse los trofozoitos en el corion,
muscular de la mucosa. (B) Fragmento de hígado con absceso amibíano; la zona clara corresponde a necrosis. (C) Zona situaciones se dan en enfennedades crónicas de las bajo las criptas que aún conservan el epitelio, y en
de necrosis hepática en el absceso. (D) Algunos trofozoítos en la pared del absces!). (E) Absceso hepático complicado vías biliares, iniciadas tal vez por una fasciola, o del la vecindad aparece la mucosa necrosada, pero pre­
de flebitis en ramas intrahepáticas. (F) Invasión vascular por trofozoítos de E. !,isto(vtica. (G) Invasión vascular por sistema nervioso central, producidas por un cisti­ sente. Asimismo, en la amibiasis hepática lo primero
trofozoítos de Bola11tidi11111 coli. cerco. es la necrosis tisular de tipo coagulativo, que da al
Para facilitar la comprensión de los problemas, tejido un aspecto macizo (Figura 4-2B, C); secunda­
vamos a analizarlos de acuerdo al esquema clásico riamente, el tejido puede licuarse y se forma la cavi-
cutánea, etc. La imagen histológica también se mo­ otras etiologías, como micosis; las lesiones leish­ de la enseñanza de la patología general; así veremos . dad del absceso; los parásitos pueden encontrarse en
difica con el tiempo; por ejemplo, una leishmaniosis maniásicas viejas se cubren de costras hiperque­ sucesivamente la necrosis, las degeneraciones e el borde de la zona necrosada (Figura 4-2D). El
temprana es una simple pápula con. reacción infla­ rató�il!as y S!,l . diagnóstico etiológi.co .se hace muy infiltraciones, los trastornos del crecimiento, las pig­ . fenó.meno necrótico puede hacerse mucho más ex­
matoria aguda; luego se ulcera o forrna'granulornas dificil.' •,.. 1 ·• ·
mentaciones y las calcificaciones patológicas, ·1os tenso y grave si en la vecindad del absceso se produ­
que exigen diagnóstico diferencial con procesos de En algunas ocasiones, el parásito es sólo la causa trastornos circulatorios y la inflamación. ce la complicación trornbótica de las venas hepáticas
(Figura 4-2E).
5.8 PAR,IS/TOLOG/A MEDICA PATOLOG/A GENERAL DE L,1S PARASITOSIS 59

.CgJ
.. ..___________ ---� - ' .... Figura 4-5. Toxoplasmosis. (A) Ganglio linfático a pequeño aumento con toxoplasmosis; se aprecia grupos de células
,. ' "

claras que corresponden a focos de hiperplasia histiocitaria. (B) Un pseudoquiste de toxoplasma en el mismo ganglio;
en el espacio claro periquistico hay algunos parásitos libres. (C) Miositis toxoplásmica: a la izquierda, un pseudoquiste
en el espesor de una fibra y a su derecha, un foco de reacción inflamatoria mononuclear. (D) El mismo caso de miositis
para mostrar mayor intensidad del proceso inflamatorio, y a la derecha, una fibra muscular con necrosis hialina.

En la toxoplasmosis congénita, la corteza cere­ DEGENERACIONES E INFILTRACIONES


bral sufre una extensa necrosis multizonal con des­
aparición de circunvoluciones, y a menudo hay cal­ Este capítulo tiende a desaparecer, o ser intensa­
cificación secundaria en estas áreas (Figura 4-4A, mente modificado por las técnicas modernas de estu­
B). También se ve necrosis de tipo hialino en las dio histopatológico; sin embargo, no podemos olvi­
fibras musculares estriadas, en la miositis toxoplás­ dar los miocardios e hígados color café oscuro como
mica (Figura 4-5D). chocolate de los niños que mueren en caquexia
En la tripanosomosis americana y en las toxo­ tricocefalósica, cuyas vísceras, pese a la juventud,
plasmosis miocárdicas, también hay necrosis de las parecen las de un anciano canceroso. Asimismo, que­
fibras cardíacas, que resultan ocupadas parcial o to­ remos hacer énfasis en la metamorfosis grasa severa
Figura 4-4. Toxopla�mosis congénit�- (A) Cerebro con extensas zonas de destrucción cortical. (EÍ) Mismo caso, en cortes talmente por las colonias de parásitos (Figura 4-6B, del hígado y degeneración grasosa del miocardio en
cor�nales para a�rec mr focos de calc,ficació� e hidrocefalia. (C) Sección ecuatorial del ojo del mismo caso: a la izquierda C). los pacientes con anemia uncinariósica intensa; es­
_ La larva de bermatobia hominis puede necrosar tos miocardios pueden condicionar insuficiencia
la cornea y el cnstalmo, a la derecha el nervto óptico. Puede apreciarse extenso desprendimiento de la retina, tras el cual
se acumula exudado que coagula. Entre los cuatro puntos de tinta se ha circunscrito un foco de retinocoroiditis donde el hueso de la bóveda craneana hasta penetrar en el cardíaca que en el hígado se descubre dificilmente
se interrumpe la línea retiniana. (D) Al centro se aprecian dos células alargadas y sobre ellas un pequeño grupo de cerebro y producir una placa de meningitis (Figura porque es enmascarada por la grasa. En la decidua
toxoplasma, que pueden apreciarse en detalle como bananitos en la foto E. 4-1 A, B). Entre las filarias, Wuchereria bancrofti de los abortos por toxoplasmosis es muy útil la de­
necrosa los ganglios linfáticos y tejidos vecin9s de generación hialina, que orienta al patólogo hacia la
Cuando en el intestino hay grandes cantidades de las zonas en- que se aloja. búsqueda de los parásitos; usualmente, estos peque­
daria, sea por compresión o por el proceso inflama­
Ascaris, puede producirse un infarto i_ntestinal por Los ejemplos podrían multiplicarse, pero lo im­ ños fragmentos de decidua hialinizados están en
torio sey9ro qu� ex),¡te (Figura 4-3A, B), dado que el
compresión. En la ascariasis hepática, la colangitis portante es comprender qíie tejido necrótico es teji­ corttácto con vellosidades coriales que han perdido
parásito abrió la vía y arrastró bacterias en su cu­
resultante produce necrosis parenquimatosa secua- do muerto que debe o puede a veces eliminarse, pero el trofoblasto, o se han necrosado.
tícula.
no siempre sin producir complicaciones.
6JJ PARASITOLOGIA MEDICA PATOLOGIA GENERAL DE LAS PARASITOS!S 61
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Figura 4-7. (A) Foco hemorrágico en la submucosa intestinal que pennite ver huevos embrionados de Strongy/aides
Figura 4-6. Miocarditis toxoplásmica y chagásica. (A) Puede apreciarse un aneurisma del tercio apical del ventrículo stercoralis dentro de la hemorragia y en el fondo de algunas criptas (izquierda). (B) Detalle de la anterior, que perraite
izquierdo, en miocarditis crónica toxoplásmica: la pared ventricular mide 13 mm de espesor, en tanto en el ápex, mide apreciar fragmentos de larva en la mucosa. (C) Balantidiosis: úlceras de boca amplia y tendencia hemorrágica. (D) Colitis
1,5 mm (flecha). (B) Seudoquiste de Toxoplasma gondii que ocupa todo el espesor de una fibra miocárdica; hay una amibiana con intensa necrosis y discreta hemorragia.
tenue calcificación, que le da aspecto como nublado. (C) Dos fibras miocárdicas, parcialmente ocupadas por nidos de
amastigotos de Trypanosoma cruzi, en miocarditis subaguda chagásica.
grupos de histiocitos significan, casi con seguridad, irritación que produce el parásito, precede a la trom­
que es una linfoadenitis toxoplásmica en ganglios de bosis, y una vez producida ésta, se precipita el infar­
TRASTORNOS DEL CRECIMIENTO do forman granulomas y es necesario hacer diagnós­ gente joven, donde generalmente se sospecha la to regional con todas las consecuencias clínicas fá­
tico diferencial con procesos de otra etiología, espe­ existencia de un !infama (Figura 4-5A, B). cilmente comprensibles.
Util al patólogo es la hiperplasia que se da en los cialmente micosis. En la toxoplasmosis ganglionar Otra hiperplasia de interés es la del endotelio La atrofia es otro trastorno del crecimiento digno
histiocitos de los órganos linfáticos parasitadós por resulta muy dificil ·demostrar los parásitos y es nece­ vasculár en las venas o arterias donde hay un helmin­ de" considerarse. Es evidente en la retina de los casos
protozoos, como sucede en la leishmaniosis, la tripa­ sario hacer muchos cortes para dar con ellos, pero to adulto, como sucede en lá angiostrongilosis; cree­ de coriorretinitis toxoplásmica (Figura 4-4C, D, E).
nosomiosis americana y la toxoplasmosis. A menu- histopatológicamente las áreas claras constituidas por mos que la hiperplasia endotelial, producto de la También se produce en la mucosa digestiva en
62 PARAS/TOLOG/A MEDICA PATOLOGIA GENERAL DE LAS PARAS/TOS/S 63

En la leishrnaniosis cutánea americana, con la Anemia. A veces muy severa, es característica de


curación queda una cicatriz pigmentada, que la tie­ la uncinariosis por pérdida constante de sangre no
nen hasta los niños de pocos meses de edad enJas compensada con un aporte adecuado de proteínas y
poblaciones indígenas que viven en la selva. hierro. Cuando la desnutrición severa se asocia a
En el paludismo, los órganos corno el miocardio, uncinariosis, puede haber edema generalizado, tanto
hígado, riñón y cerebro tornan un color negruzco o por hipoproteinen;iia corno por la degeneración
pardo muy oscuro debido a la hernozoína. grasosa del miocardio, que condiciona, incluso, in­
En el intestino de pacientes con parasitosis que suficiencia cardíaca con dilatación acentuada de las
producen sangramiento crónico, como la uncinariosis, cavidades ventriculares y éstasis hepático centrolo­
amibiasis y estrongiloidosis, la mucosa tiene un co­ bulillar; este hecho puede pasar inadvertido si no se
lor seudomelánico debido a la hemosiderosis. Ya busca a través del microscopio cerrando el diafrag­
hemos señalado el depósito de lipofuscina en el ma, porque está enmascarado por la metamorfosis.
miocardio e hígado de los niños caquécticos trico­
cefalósicos. Enfermedad tromboembólica. Suele verse en
/ CALCIFICACION PATOLOGICA
los territorios de la cava superior e inferior en niños
con uncinariosis y desnutrición, y a menudo produ­
ce embolias pulmonares que son la causa de muerte.
Es de tipo distrófico y se aprecia fácilmente en las
Si la trombosis es del territorio porta mesentérico, se
zonas necróticas del encéfalo en la toxoplasmosis pueden producir infartos intestinales y embolias
congénita (Figura 4-4B). En hidatidosis no es infre­ intrahepáticas. En la angiostrongilosis abdominal,
cuente la calcificación parcial o total del quiste.
la trombosis desencadena un. cuadro violento· de
También en la triquinosis las larvas enquistadas se infarto intestinal que obliga a hacer cirugia de ur­
calcifican, lo mismo que los cisticercos. A veces hay gencia y resecciones amplias del intestino.
huevos de parásitos en el 'tejido conjuntivo que con
el tiempo, sufren calcificación.
Edema. Constituye uno de los signos más impor­
tantes de la fase aguda de la triquinosis. El edema
TRASTORNOS CIRCULATORIOS puede ser discreto, con cambio de coloración e indo­
Son de diversa índole y en ocasiones constituyen loro, como en el complejo oftalmoganglionar de la
el síndrome principal de la enfermedad parasitaria. enfermedad de Chagas, o puede ser severo y crónico
como sucede en las filarias por Wuclzereria bancrofli.
Hiperemia. Hay hiperemia activa en algunos pro­ En esta enfermedad, los ganglios linfáticos regiona­

1
cesos inflamatorios, corno el complejo.oftalmogan­ les, donde se alojan los parásitos adultos, tienen ..
glionar de la tripanosomosis americana, en las mani­ Ílbportantes esclerosis en el hilio que deben contri­
festaciones oculares de la triquinosis aguda y en las buir al trastorno circulatorio: Ya hemos señalado la
etapas iniciales de las leishrnaniosis cutáneas. existencia de edema hepático, visible en los es'pacios
En la neumonitis toxoplásmica, la hiperemia de de Disse en el paludismo severo, lo que sin duda
las mucosas respiratorias altas puede ser tan intensa contribuye a la hepatomegalia en esta enfermedad
que produce un enantema, indistinguible del obser­ (Figura 4-8E).
vado· en el sarampión, lo que provoca una confusión
diagnóstica. La mucosa colónica es hiperémica en INFLAMACION
forma de múltiples focos en la arnebiasis aguda, y
más intensamente, hasta llegar a la hemorragia, en la Para el docente de patología, las enfennedades
Figura 4-8. Malaria. (A y B). Nefrosis hemoglobinúrica: se aprecian cilindros de hemoglobina en los tubos; además los balantidiosis (Figura 4-7C). parasitarias son muy útiles, porque pern1iten ver en
capilares repletos de trofozoítos de P.Jalcipamm. (C) Glomérulo en cuyas asas capilares se ven eritrocitos con finos puntos fonna muy gráfica todas las variantes del proceso
oscuros correspondientes a trofozoítos. (D) Capilares pulmonares y capilares cerebrales cuyos eritrocitos están en alto Hemorragia. Toma aspecto puntiforme en el inflamatorio y aun de sus secuelas.
porcentaje parasitados por P.fa/cipar11111. (E) Hígado en malaria falciparum. Se aprecia un espacio claro alrededor de los intestino delgado de la estrongiloidosis y uncina­ Hay algunos hechos curiosos en patología para­
capilares que corresponde a edema del espacio de Disse. Puede apreciarse también la parasitemill, riasis; a veces, lá hemorragia se extiende por la sub­ sitológica; usualmente en la inflamación se busca la
mucosa, donde pueden apreciarse huevos embrio­ presencia de exudado, con detenninado tipo de cé­
nados y larvas de estrongiloides (Figura 4-7A, B). lulas predominantes; sin embargo, al hablar de hepa­
parasitosis de evolución crónica, como uncinariosis, PIGMENTACIONES PATOLOGICAS En la parangomimosis pulmonar, son caracterís­ titis o encefalitis palúdica, sabemos que no hay reac­
amibiasis y tricocefalosis. Lo mismo ocurre en los ticas las pequeñas hemoptisis repetidas. En el palu­ ción leucocitaria en el tejido: sólo se aprecia al com­
órganos que sufren compresión crónica por la acción Mencionaremos en primer lugar la ictericia, por­ dismo maligno, producido por Plas111odi11111 fal­ ponente alterativo y algunos trastomos circulatorios,
de un parásito, como sucede en la hidatidosis. Otro que actualmente·e1 paludismo está volviendo a nues­ cipanim, hay cierto grado de hematuria, acompaña­ como el edema.
tanto ocurre en las 11seuronas de la corteza cerebral, tros pueblos y los médicos jóvenes y viejos, piensan do de intensa hemoglobinuria, que permite apreciar Es muy fácil demostrar en muchos casos, como
en el caso de fa' hicfroéefalia secundaria a toxo­ en cualquier otra enfermedad hasta que la biopsia a en los tubos de la medular, los cilindros hemáticos y en la arnebiasis hepática o en la toxoplasmosis ence­
plasmosis.. veces permite hacer el diagnóstico oportunamente. hemoglobinúricos (Figura 4-8A, B). fálica, que es el parásito, corno ente extraño, el que
.64 PARASITOLOGIA MEDICA PATOLOGIA GENERAL DE LAS PARAS/TOS/S 65

desencadena el proceso inflamatorio; pero hay situa­ submucosa colónica en la balantidiosis (Figura 4-2G), En la toxoplasmosis encefálica congénita sabe­ Costarric 1965; 8:121-8.
ciones, como sucede a veces en la miocarditis aunque nunca hemos visto migración de Balanti­ mos que hay grandes zonas de destrucción cortical Céspedes R, Salas J, Meckbel S, Troper L, Müllner F,
chagásica y en la toxoplásmica, especialmente en las dium hacia el hígado. Sin embargo, el Dr. Ernesto (Figui:a 4-4B), y que los seres humanos que padecen Morera P. Granulomas entéricos y linfáticos con in­
formas crónicas, en que cerca de una colonia de Jiménez, patólogo de un hospital provincial en Puer­ la enfermedad se convierten en una carga para la tensa eosinofilia tisular, producidos por un _estron­
parásitos no se aprecia reacción inflamatorio; en to Limón, Costa Rica, ha encontrado un caso de sociedad. gilídeo (Strongylata). I. Patología. Acta Med Costarric
cambio, ésta puede ser importante lejos del sitio en invasión por Balantidium al seno marginal de gan- De todo lo dicho, podemos deducir que las enfer­ 1967; I0:235-55.
que el parásito está, lo que hace suponer que hay glios linfáticos mesentéricos. medades parasitarias, de las cuales tenemos cientos Céspedes R, Arguedas J, Guillén G, Hevia G. Dermatobia­
sustancias antigénicas, producidas por el parásito, Los vasos mesentéricos son el hábitat de las for­ de millones en América Latina, deben ser motivo sis mortal. Acta Med Costarric 1962; 5:175-81.
que provocan reacción a distancia. mas adultas en la angiostrongilosis abdominal, y re­ fundamental de estudio e investigación "en la Céspedes R, Rodríguez O, Valverde O, Femández J,
Los tipos de exudado también suelen variar: cientemente han aparecido también en la arteria estructuración de cualquier programa de salud para Gónzalez F, Jara JW. Balantidiosis: Estudio de un caso
puede ser purulento, como en las colangitis por espermática, produciendo necrosistesticular. Proba­ nuestros pueblos. anatomoclinico masivo con lesiones y presencia de pa­
áscaris (Figura 4-3A, B) por esquistosoma o por blemente cuando se haga una revisión de más casos, rásitos en el intestino delgado y pleura. Acta Med
fasciola y en la meningitis producida por larva de aparecerán otros territorios comprometidos. Simi­ Costarric 1967; 10:135-51.
Dermatobia hominis (Figura 4-3A). Puede haber lar situación se produce en la esquistosomigosis por BIBLIOGRAFIA Céspedes R, Müllner F, Segura JJ, Ruiz PJ, lngianna M,
exudado hemorrágico, como en la colitis balanti­ S.japonicum y S. haematobium. En la filariosis por Acuña RA. Miositis toxoplásmica en un adulto. Acta
diana, en la paragonimosis pleuropulmonar y en la W bancrofti, las microfilarias se encuentra¡¡ en la Apt W. .Helmintiasis intestinales humanas en América Med Costarric 1973; 16:75-82.
estrongiloidosis. corriente sanguínea, especialmente durante la no­ Latina. (Editorial) Parasitol al Día 1987; Ú:3. De Oliveira Abneida H. A lesiao verticilar de cardiopatía
Para el histopatólogo, la infiltración eosinofilica che. En nuestra experiencia, en una ascariasis de Céspedes R. Amebiasis 11. Experiencia anatomopatológica. chagásica crónica. Aspectos morfológicos. Rev Goiana
tisular sugiere buscar algún helminto, sea adulto, sus las vías biliares, los huevos del parásito entraron en Estudio de 3.220 autopsias. Acta Med Costarric 1919; Med 1982; 28:23-3 l .
larvas o huevos. los vasos suprahepáticos y produjeron émbolos en 1:185-208. Loria R , Céspedes R , Quesada E , López LA. Enfennedad
La hiperplasia histiocitaria, con o sin formación las ramas de la arteria pulmonar (Figura 4-3C). Céspedes R. Trastornos circulatorios en las helmintiasis tromboembólica en desnutridos parasitados. Rev Méd
de granuloma, también es un indicador histológico Seguramente varios otros parásitos usan la vía vas­ humanas. Rev Cuba Med Trop 1975; 27:97-102. Hosp Nac Niños [Costa Rica] 1967; 61-78.
que invita a buscar parásitos, sean protozoos, como cular para llegar a distintos órganos. Conviene re­ Céspedes R, Aguilar A. Miocarditis chagásica aguda mor­ Morera P, Céspedes R. Angiostrongilosis abdominal. Acta
en la leishmaniosis, toxoplasmosis, tripanosomosis cordar que el paludismo, las tripanosomosis africa­ tal. Rev Biol Trap 1955; 3:31-42. Med Costarric 1971; 14:159-73.
americana o amibiasis, o bien, huevos o fragmentos na y americana, son henioparasitosis, transitorias o Céspedes R, Morera P. Toxoplasmosis humana generali­ Piza J, Troper L, Céspedes R, Miller JH, Berenson GS.
de larva o de adultos de helmintos. permanentes. zada. Rev Biol Trop 1953; 3:183-202. Myocardial lesion and heart failure in infantile
· Ya hemos señalado que la necrosis es importante Vale la pena reflexionar sobre las posibles secue­ Céspedes R, Pereira C. Abscesos hepáticos por Ascaris malnutrition. Am J Trop Med Hyg 1971; 20:343 -55.
en el proceso inflamatorio parasitario, dando ejem­ las de una enfermedad parasitaria; basta pensar en lumbricoides: Estudio de tres casos. Acta Med
plos como el de toxoplasmosis encefálica, amibiasis la ceguera que por iritis crónica quede en la oncocer­
intestinal o hepática, y cuando la parasitosis provo­ cosis; igualmente puede quedar ciego un ojo, total
ca una complicación vascular de tipo trombótico. o parcialmente después de la retinocoroiditis toxo­
Actualmente damos mayor importancia, sin embar­ plásmica (Figura 4-2C, D, E).
go, a la presencia de exudado espumoso en los Otra secuela importante es la esclerosis postinfla­
alvéolos pulmonares, especialmente en niños des­ matoria, como sucede en el miocardio de la tripa­
nutridos y pacientes inmunosuprimidos; este exu­ nosomosis americana y en la toxoplasmosis mio­
dado nos induce a hacer colocaciones especiales cárdica, donde la cicatriz que resulta puede producir,
para buscar Pneumocystis, sobre todo si en el tejido a la larga, un aneurisma ventricular izquierdo (Figu­
predominan las células plasmáticas. ra 4-6A). Dentro de éstos aneurismas, es posible que
Otro tipo de inflamación importante en parasito­ se geste la complicación trombótica, bien descrita
logía es la úlcera que se ve en la piel de la leish­ por De Oliveira Almeida, con el riesgo de embolia
maniosis americana, y en el tubo digestivo de la en el territorio cerebral, o cualquier otro territorio de
balantidiosis y amibiasis; cabe aquí señalar que en la aorta. También hay esclerosis en las adherencias
raras ocasiones, la amibiasis puede invadir el tracto que se producen entre la cara inferior del diafragma
genital femenino, pero que cuando lo hace, produce y la cara superior del hígado en los abscesos hepá­
úlceras cervicales que inducen a los clínicos a buscar ticos amibianos, u otro tipo de colangitis crónica que
carcinoma en fonna persistente, basados en la con­ pueda ser condicionada por parásitos.
sistencia finne de la lesión; el demostrar la existen­ Una secuela importante es también el edema cró­
cia de parásitos en estos casos, es dificil y exige nico que producen algunas formas de filariosis, las
hacer cortes seriados. que tienen muy pocas probabilidades de curación.
La invasión vascular que hacen parásitos que Es necesario considerar, además, la aracnoiditis cró­
usualmente no se encuentran en la sangre, es otro nica que se produce en la cisticercosis y que genera
hecho que el médico no debe olvidar, porque le puede importantes trastornos neurológicos funcionales.
explicar, en parte, la sintomatología y evolución de En el tubo digestivo, mencionaremos la atrofia de
· los procesos; es frecuente en la amibiasis (Figura las mucosas, tanto en el intestino delgado. ·en la
4-2F), constituyendo la ruta lógica de migración de uncinariosis, como en el colon en la amibiasis y
los parásitos hacia el hígado; se ve también en la tricocefalosis.
INMUNOLOGIA OE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 67
�Capítulo 5

INMUNOLOGIA DE LAS do. Como estas células poseen receptores especia­


les para las superficies mucosas, finalmente retornan
antígenos endógenos generalmente inducen sólo
respuestas mediadas por células.
y se alojan permanentemente en las mucosas. No La mayoría de los antígenos tienen un peso mo­
INFECCIONES PARASITARIAS obstante, esta migración les permite exportar res­ lecular superior a los 20 kilodaltons (kDa) y están
puestas inmunes que se iniciaron en una localización constituidos por más de 200 aminoácidos. El siste­
OMAR O. BARRIGA (mucosa intestinal, por ejemplo) a otras mucosa¡¡ ma inmune no reconoce la molécula completa de
(mucosa bronquial, por ejemplo). antígeno, sino que sólo pequeñas porciones de ella
(formadas por unos pocos aminoácidos) que se de­
LOS ELEMENTOS DEL SISTEMA INMUNE nominan epítopos. Dependiendo del tamaño de la
molécula, un antígeno puede poseer varios epítopos,
Antígenos (AG) y epítopos (E) y algunos de ellos pueden incluso estar traslapados.
En relación con los antígenos, es importante dis­
La avalancha de avances técnicos y conceptuales puesto por órganos centrales y periféricos. Los Se llama antígeno o inmunógeno a cualquiera cutir el concepto de célula autóloga defectuosa. Esta
que ha ocurrido en la última década en inmunología órganos centrales (médula ósea, timo y bolsa de molécula que puede generar una respuesta inmune es cualquier célula de un individuo que presenta en
y en las ciencias asociadas, ha traído nuevas oportu­ Fabricio en las aves) son el lugar de origen y madu­ específica. La mayoría de los antígenos son proteí­ su superficie (accesible al sistema inmune) antíge­
nidades para la resolución de los problemas carac­ ración de las células linfoides. La respuesta inmune nas o glicoproteínas que ingresan al organismo como nos diferentes a los antígenos propios del individuo.
terísticos de la disciplina. La inmunología de parási­ no ocurre en estos órganos. Los órganos periféricos parte de la composición de virus, bacterias, hongos,
:¡¡
Los epítopos de estos antígenos son reconocidos por
tos no sólo se ha recuperado, sino que muchos de los son los ganglios linfáticos, el bazo, y el tejido linfá­
1
o parásitos (antígenos exógenos). el sistema inmune como moléculas extrañas, de modo
nuevos conceptos en inmunología han sido revela­ tico asociado a las mucosas. En estos sitios es donde Ocasionalmente, las propias células del hospe­ que generan las correspondientes reacciones inmu­
dos con modelos parasitarios. En estos momentos, la la respuesta inmune toma lugar. Los órganos perifé­
1:
dero pueden sintetizar antígenos cuando son estimu­ nes. Estas moléculas son comúnmente sintetizadas
relación parásito-hospedero se entiende en muchos ricos, a su vez, pueden dividirse funcionalmente en ladas por una infección intracelular (por un virus, por las propias células del individuo cuando sufren
casos con una precisión que era inimaginable hace sistémicos y locales. bacteria o parásito) o cuando sufren una transforma­ infecciones por virus, bacterias o parásitos que alte­
sólo una década. Muchos problemas nuevos han ción tumoral (antígenos endógenos). Los antígenos ran su metabolismo. Muchos tumores también pro­
aparecido, pero las alternativas para avanzar en el Organos periféricos sistémicos. Son los gan­ exógenos comúnmente inducen respuestas de anti­ ducen neoantígenos que se expresan en la superficie
conocimiento actual son claras. El manejo de este glios linfáticos que drenan la linfa de los tejidos cuerpos o mediadas por células, mientras que los de las células tumorales.
conocimiento moderno es indispensable para el es­ intersticiales sistémicos, y el bazo que filtra la san­
p_ecialista en salud. No sólo porque determina nue­ gre que recorre todo el organismo. Estos órganos
vos parámetros de diagnóstico, tratamiento, pronós­
tico y control de las enfermedades parasitarias sino
poseen células procesadoras de antígeno, linfocitos
B, y linfocitos T que interceptan los antígenos que se EXTRACELULAR
que, también, porque le prepara para entender los encuentran en la circulación. Ellos generan las res­
extraordinarios avances que seguramente aparece­ puestas inmunes que son expresadas en la circula­
rán en el futuro cercano. ción y en los tejidos sistémicos (producción de Igs
M, G, A, y E, e inmunidad mediada por células). Los
CD4
linfocitos recirculan permanentemente entre los gan­
EL SISTEMA INMUNE glios linfáticos y el bazo a través de la sangre y la CLASE Il
El sistema inmune está a cargo de la identifica­
linfa. Esto permite que las respuestas inmunes que
pueden haberse iniciado localmente se generalicen a
RCT
ción y eliminación de moléculas ajenas al organis­ todo el organismo.
mo. A menudo estas moléculas son parte de virus,
bacterias, o parásitos que invaden el organismo, o de Organos periféricos locales (o mucosos). Son
tumores que crecen en el organismo como un ele­ el tejido linfoide nasofaríngeo (anillo de Waldeyer),
mento extraño. La tarea de eliminar estas moléculas los ganglios linfáticos bronquiales, las placas de
requiere gran eficiencia y precisión. Eficiencia por­ Peyer, los ganglios linfáticos mesentéricos, y los
que todas las moléculas extrañas deben ser identifi­ tejidos linfáticos de la vejiga, glándulas salivares y AAAAª�!C';:;a¡
cadas y eliminadas, y precisión porque sólo las
moléculas extrañas deben ser eliminadas. Para cum­
plir este encargo, el sistema inmune recurre a un
glándulas mamarias. Estos tejidos también poseen
células procesadoras de antígenos, linfocitos B, y
linfocitos T que interceptan los antígenos que llegan
WW'""'�........,,
gran número de elementos y a complejos métodos de a las superficies mucosas. Ellos generan respuestas INTRACELULAR
regulación. inmunes que son expresadas en las mucosas, princi­
palmente la producción de IgA, pero también de IgG
\\ \\
LA ORGANIZACION DEL SISTEMA INMUNE e lgM. Aunque las respuestas de estos tejidos co­ MEMBRANA CELULAR
¡, múnmente se consideran respuestas locales de las

['
Como corresponde a un sistema orgánico a cargo superficies mucosas, los linfocitos estimulados por
de la vigilancia en todo el organismo, el sistema antígenos en estas localizaciones corrientemente Figura-5-1. Moléculas de la familia de las inmunoglobulinas. Esta familia de proteínas o glicoprotelnas incluye una serie
inmune no está localizado en un lugar en particular · •migran a los ganglios linfáticos regionales y de allí de moléculas de la superficie celular que ejercen importantes funciones en la respuesta inmune. Aqui están representadas
sino que distribuido en todo el cuerpo. Está com- a la sangre, en la cual circulan por un tiempo limita- la inmunoglobulina M (lgM), el receptor de células T (RCT), la proteína de histocompatibilidad de clase 11 (Clase 11),
Y el complejo de diferenciación 4 (CD4).

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• 68 PARASJTOLOGIA MEDICA
INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 69

Moléculas de la familia focitos T ocurre una extensa reorganización de los misma molécula de proteína de clase I o II se puede brevemente las células más relevantes a la inmuni­
de las inmunoglobulinas genes que codifican para los RCTs que termina en la combinar con numerosos antígenos diferentes). Es­ dad contra parásitos.
producción de quizás unos Ios RCTs diferentes, en tas características permiten que casi cualquier epíto­
Las inmunoglobulinas son glicoproteínas forma­ otros tantos linfocitos T. Es inevitable que durante Las células presentadoras de antígenos (CPA).
das por cadenas peptídicas con lazos que se repiten po (endógeno o exógeno) pueda encontrar una pro­
estas reorganizaciones algunos de los RCTs que se <'Los antígenos exógenos deben ser procesados por
a lo largo de la molécula. Se supone que los genes teína de histocompatibílidad (clase I o II) con la cual
generan tengan afinidad para combinarse con epito­ combinarse para estimular los linfocitos(citotóxicos ciertas células (células presentadoras o procesado­
que codifican para estas moléculas han derivado por pos presentes en los tejidos del individuo. Estos
o cooperadores) hacia la producción de una respues­ ras de antigeno, o CPA) para iniciar una respuesta
multiplicación de un gen ancestral que codificaba RCTs son eliminados durante la diferenciación de inmune efectiva. Estas células capturan el antígeno
para un péptido de unos l00 aminoácidos, con un ta inmune.
los linfocitos T en el timo de modo que se evita la por fagocitosis o endocitosis, lo. digieren en frag­
solo lazo. Otras proteínas que parecen construidas Las proteínas de clase I y II son sintetizadas en
producción de reacciones autoinmunes. Los linfoci­ mentos pequeños (epítopos) en los lisosomas, per­
de acuerdo a un padrón similar han sido agrupadas el retículo endoplásmico de las células respectivas,
tos que sobreviven aun tienen la capacidad de reco­ miten la conjugación de los epítopos con moléculas
en lo que llamamos la familia de las inmunoglobu­ y Juego transportadas al aparato de Golgí. Desde
nocer muchos millones de epítopos diferentes. de clase II, y reexponen en su superficie el complejo
linas. Las principales proteínas en esta familia son allí, las proteínas de clase I son transportadas direc­
Cada molécula de RCT en la superficie de los epítopo-molécula de clase II. La mayoría de los
las inmunoglobulinas mismas, los receptores de las tamente a la superficie de las células nucleadas mien­
linfocitos T está siempre asociada con otros cinco tras que las proteínas de clase II son transportadas macrófagos y monocitos, las células dendríticas, y
células T, las proteínas de clase I o II del complejo péptidos, formando así lo que se llama el complejo primero al compartimento lisosomal y después a la aun los propios linfocitos B pueden actuar como
principal de histocompatíbilidad, y las proteínas de CD3. La razón de esta asociación no se conoce pero superficie de las células presentadoras de antígenos. CPA.
los complejos de diferenciación(Figura 5-1). Todas se ha especulado que la porción intracelular de los
Esta es una diferencia importante porque las proteí­ La ingestión del antígeno o el contacto del com­
ellas ejercen funciones fundamentales en la respues­ RCTs es demasiado corta para transmitir señales al nas de clase I se combinan con antígenos endógenos plejo epítopo-molécula de clase II con los RCT ac­
ta inmune. interior de la célula y necesita las otras moléculas del (generados en la misma célula) en el retículo endo­ tiva la CPA para secretar las citocinas IL-1, IL-6,
complejo CD3 para cumplir esta función. plásmico mientras que las proteínas de clase II se IL-12, y el factor de necrosis tumoral. Estas citoci­
Las inmunoglobulinas (lg). Las Igs o anticuer­
combinan con antígenos exógenos(generados fuera nas tienen funciones muy importantes en el desenca­
pos son glicoproteinas producidas por las células Las proteínas de clase I o II (PI o PU). El complejo denamiento de la respuesta inmune.
de la célula) pero procesados por la célula en el
plasmáticas, que, a su vez, son productos de la dife­ principal de histocompatibilidad (CPH) es un grupo
compartimento lisosomaL
renciación de los linfocitos B. La estructura básica de genes en el cromosoma 6 de los humanos (o el Los linfocitos. Son producidos originalmente en
de las Igs consiste en dos cadenas de polipéptidos de cromosoma 17 de los ratones) cuyos productos es­ la médula ósea y adquieren sus características fun­
Los complejos de diferenciación (CD). Los CD
unos 440 aminoácidos cada una (cadenas pesadas), tán asociados con el reconocimiento de las células cionales en el timo (linfocitos o células T) o en la
franqueadas por otras dos cadenas de unos 220 son un conjunto de unas 100 proteínas diferentes que
propias o extrañas al organismo. Estos genes están se encuentran en las superficies de diferentes linfo­ misma médula ósea u otros órganos linfáticos(linfo­
aminoácidos cada una(cadenas livianas)(Figura 5-1). distribuidos en grupos que codifican para tres clases citos y otras células. A medida que se iban descu­ citos o células B). Estas células ejercen diferentes e
Al extremo distal de cada cadena pesada y su corres­ de moléculas: I, II, y III. Las proteínas de clase I (PI) briendo más y más de estas proteínas, su nomencla­ importantes funciones en la respuesta inmune.
pondiente cadena liviana, los aminoácidos respecti­ son glicoproteínas sintetizadas por virtualmente to­
tura empezó a hacerse inmanejable. Finalmente, en Pueden ser identificadas por la presenda de cier­
vos forman una hendidura para acomodar un epíto­ das las células micleadas. Esta proteínas se combi­ 1982, se propuso una nomenclatura uniforme para tas glicoproteínas en sus membranas externas.
po. Este es el lugar de combinación con el antígeno nan con los epítopos de las células propias del indi­ Linfocitos B. Son reconocidos por la presencia.
estas moléculas bajo el nombre de complejos de
y sólo acepta epitopos cuya composición en ami­ viduo que han sido alteradas por una infección o una
noácidos es complementaria con su propia compo­ diferenciación (CD). Indudablemente estas proteí­ de lgs y de ciertos CD(CD 19, CD20, y CD22) en su·
transformación tumoral, y el complejo proteína de nas juegan algún rol en el funcionamiento de la cé­ superficie. Estas Igs tienen la capacidad de combi­
sición en aminoácidos. En los linfocitos, las Igs exis­ clase I + epítopo(PI+E) estimula a los linfocitos T lula respectiva pero su función específica aún no es narse con antígenos (solubles o particulados) que
ten como proteínas en la superficie de los linfocitos citotóxicos. Las proteínas de clase JI (Pll) (Figura conocida en la mayoría de los casos. Como diferen­ contengan epítopos con una composición aminoací­
B. Cada linfocito B posee unas I os moléculas de Igs, 5-1) son glicoproteínas producidas por las células tes linfocitos poseen algunos CD similares y otros díca complementaria a la de la lg. Los epítopos que
todas idénticas. Sin embargo, durante la multiplica­ presentadoras de antígenos(macrófagos, células den­ diferentes, en la práctica se usa la presencia de cier­ reaccionan con las Igs de los linfocitos B general­
ción de los linfocitos B originales, los genes que dríticas, linfocitos B). Estas proteínas se combinan tos CD para identificar el linfocito respectivo. La mente tienen una longitud de unos 15 a 22 aminoáci­
codifican para las Igs se reorganizan extensamente y con epítopos generados fuera de las células del indi­ industria farmacéutica fabrica anticuerpos monoclo­ dos. Comúnmente estos epítopos se encuentran en
terminan fonnando más de 108 moléculas de Igs di­ viduo(pero procesadas por las células presentadoras nales que reaccionan específicamente con algunos la superficie de proteínas mucho más grandes, de
ferentes, en otros tantos linfocitos B. El número total de antígeno), y el complejo proteína de clase 11 +
de epitopos que un individuo puede reconocer (y CD. Los CD más relevantes para nuestros propósi­ manera que son accesibles al sistema inmune. Como
epítopo(PII+E) estimula a los linfocitos cooperado­ tos son: el CD3+ que está presente en todos los la cadena aminoacídíca de las proteínas grandes gene­
acomodar en sus Igs respectivas), por lo tanto, ex­ res. L'as moléculas de clase III corresponden a com­
cede los 100 millones. linfocitos T, el CD4+ que está presente en los linfo­ ralmente está plegada sobre sí misma (estructura
ponentes del complemento, factores de necrosis tu­ terciaria), es posible que un epítopo esté formado
citos cooperadores, y el CDS+ que se encuentra en
moral, y otras proteínas séricas: Las proteínas de los linfocitos citotóxicos. por la yuxtaposición de aminoácidos localizados en
Los receptores de las células T(RCT). Los RCT clases I y II poseen una hendidura parecida a la de
son también proteínas de superficie pero éstas se diferentes sitios de la proteína. Si es así, los amino­
las Igs en su extremo distal que les permite combi-
Las células del sistema inm.une ácidos quedarán separados cuando la proteína se
encuentra? e� la superficie de los linfocitos T(Figu- ·narse con los epítopos correspondientes.
desdobla al desnaturalizarse y el epítopo desapare­
ra 5-1). Sumlar a las Igs, estos receptores también �os/ocidel CPHson altamente polimórficos(es Las células fundamentales del sistema inmune cerá. En este caso, la proteína desnaturalizada no
tienen una hendidura en el extremo distal para aco- decir, cada locus puede tener una alternativa [o ale-
modar a aquel epítopo que posea una composición son los linfocitos, pero los macrófagos son esencia­ reaccionará con las mismas Igs que la proteína nati­
lo] entre muchas posibles alternativas para ese gen).
de aminoácidos complementaria a la del receptor les como iniciadores, reguladores, o efectores de la va.
Además, los alelos son codominantes(es decir, tanto
mismo. Cada linfocito T posee unos ¡os RCTs idén- ., . el..a!1::lo materno como el paterno son expresados). inmunidad en muchas ocasiones. Otras células como Liefocitos T. Son reconocidos por la presencia
ticos ·en su superficie. Como;én efi:aso''de las Igs eri .. ··· Por último, la combinación de las proteínas de clase los mastocitos,- -eosinófilos,·neutrófilos, basófilos; del RCT y del CD3 en su superficie. Diferente de las
células asesinas, etc., colaboran sustancialmente en Igs, los RCTs sólo se combinan con epítopos que,
los linfocitos B, durante la multiplicación de los lin- I o II es promiscua(es decir, diferente de las Igs, una
algunos mecanismos inmunes. Aquí discutiremos aparte de ser complementarios con su propia com-
70 PARASITOLOGIA MEDICA INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 71

pos1c10n en aminoácidos, están conjugados con sólo formas más maduras (y fisiológicamente más de oxígeno y de nitrógeno actúan inespecíficamente los basófilos y mastocitos, y los mediadores de la
moléculas de histocompatibilidad de clase I o II. activas) de los monocitos circulantes. Aparte de sobre los parásitos y sobre las células del hospede­ inflamación producidq¡; por los mastocitos. También
Funcionalmente, los linfocitos T se dividen en tres actuar como CPA, los macrófagos son importantes ro. Las células de los mamíferos comúnmente poseen fagocitan los complejos antígeno-anticuerpo(inclu­
clases. elementos efectores en la respuesta inmune. Los enzimas que neutralizan la actividad de estos radica­ yendo IgE) y reducen la inflamación correspondien­
a) Linfocitos T cooperadores (Tea). Estas célu­ macrófagos que no han sido estimulados no son les (peroxidasas, dismutasa superóxido, catalasas, te.
las producen una serie de secreciones (citocinas) muy activos fisiológicamente, condición que se de­ vitamina E). La susceptibilidad de los parásitos a
que regulan las funciones de otras células inmunes. nomina "estado de reposo". Una serie de circunstan­ estos componentes depende de su propia habilidad Los basófilos. Son células circulantes que inva­
Sus RCT se combinan únicamente con epítopos que cias, sin embargo, pueden aumentar su capacidad para neutralizar los radicales. Es interesante que el den los tejidos sólo en el curso de los procesos infla­
están conjugados con proteínas de clase 11(restric­ para fagocitar, destruir patógenos, y secretar subs­ estudio de unas cuantas especies de nematodos ha matorios. No son fagocitarías sino que ejercen sus
ción de clase II). Generalmente presentan el CD4+ tancias reguladores y efectoras (citocinas). Los demostrado que estos parásitos poseen escasas funciones mediante la descarga de sus gránulos en el
en su superficie. Los epítopos que reaccionan con macrófagos que han sido estimulados de esta mane­ enzimas detoxicantes de los radicales oxidantes. A espesor de los tejidos. Los basófilos poseen recepto­
los RCT de los linfocitos Tco generalmente tienen ra se denominan "macrófagos activados". El estímu­ pesar de que los macrófagos secretan también una res de alta afinidad(>l0-9 mol/L) para el extremo
una longitud de unos 1O a 16 aminoácidos. Como lo activador más simple es la fagocitosis misma. serie de sustancias no oxidantes, algunas de ellas caudal (Fd) de la lgE de modo que se combinan
estos epítopos son fragmentos de antígenos digeri­ Activadores más poderosos son diferentes cito­ con efectos líticos contra los tejidos del huésped, preferencialmente con los anticuerpos IgE aunque
dos por las CPA, comúnmente son polipéptidos li­ cinas y ciertos productos microbianos y parasitarios. aún no se ha descrito ninguna que tenga un efecto éstos se encuentren en muy baja concentración en
neares de manera que la desnaturalización no afecta Uno de los activadores más potentes es el interferón letal contra los parásitos. los líquidos orgánicos. Cuando las moléculas de IgE
su reacción con el RCT respectivo. En todos los y(IFNy). en la superficie de los basófilos son aglomeradas por
casos estudiados, los epítopos que estimulan las Los macrófagos poseen receptores para el extre­ Los neutrófilos. Son células fagocitarias de la combinación con el antígeno(alergeno) correspon­
células B o T son diferentes, aunque se encuentren mo caudal(Fe) de las Igs y para el factor C3b del circulación y de los tejidos. Comúnmente son las diente, los gránulos de las células se vuelcan en los
en el mismo antígeno. Cuando una célula Tco es complemento de manera que se adhieren preferente­ primeras células que llegan a un foco inflamatorio. tejidos vecinos y liberan una serie de mediadores de
estimulada por primera vez por un epítopo determi­ mente a los parásitos cubiertos por anticuerpos o por Como los macrófagos, poseen receptores para com­ la alergia de tipo 1(histamina, serotonina, leucotrie­
nado(célula Tco precursora o TcoP), secreta sólo la complemento. Si el parásito es pequeño, lo fagocitan binarse con la porción caudal(Fe) de las Igs y con nos, prostaglandinas, bradiquinina, citocinas IL-1,
citocina IL-2. Si la misma célula o su descendencia fácilmente. factores del complemento activado. Los neutrófilos IL-2, IL-3, IL- 4, IL-5, IL-6, IL-8, y FNT, etc.). En
( célula Tco activada o Tco0) es estimulada de nuevo Los macrófagos poseen varios mecanismos apro­ ejercen fagocitosis y producen radicales de oxígeno el caso de las parasitosis, algunos de los.fenómenos
por el mismo epítopo, esta vez secreta varias citoci­ piados para la destrucción de parásitos. El más co­ y de nitrógeno de manera similar a lo que discutimos fisiológicos iniciados por estos mediadores(vasodi­
nas con funciones variadas. Si las células Tco0 son mún es probablemente la fagocitosis. Los parásitos en relación a los macrófagos. Los neutrófilos son latación, permeabilidad vascular, quemotaxis de
áctivadas nuevamente por el mismo epítopo, se dife­ fagocitados son incluidos en una vacuola parasitófo­ frecuentemente mencionados como efectores de la eosinófilos y neutrófilos, agregación de plaquetas,
rencian en células Tco tipo 1 (Tcol), que secretan ra que rápidamente se fusiona con los lisosomas del inmunidad contra bacterias. Hay considerable evi­ activación del complemento, etc.), constituyen un
citocinas que promueven la inmunidad mediada por macrófago para formar un fagosoma. Los lisosomas dencia, sin embargo, de que ellos actúan como efec­ foco inflamatorio que contribuye a destruir al pará­
células, o en células Tco tipo 2(Tco2), que secretan poseen un pH alrededor de 5,0, enzimas hidrolíticas, tores muy eficientes contra una serie de helmintos de sito. Convencionalmente se les ha asignado a los
citocinas que promueven la inmunidad humoral. lisozima, y defensinas(péptidos básicos pequeños los tejidos. basófilos una función particularmente efectiva en el
b) Linfocitos Tcilotóxicos (TC). Estos linfocitos que forman microporos en las membranas biológi­ rechazo de ectoparásitos, como las garrapatas, pul­
producen secreciones que lisan células que poseen cas), toélos los cuales pueden ejercer un efecto letal Los eosinófilos. Son células moderadamente fa­ gas, y piojos. Hay alguna evidencia, sin embargo, dé
epítopos complementarios a sus RCT. Los RCT de sobre los parásitos fagocitados. La activación de los gocitarlas, mayormente localizadas en los tejidos. que la falta de basófilos no disminuye el desarrollo
las células TC sólo se combinan con epítopos que, macrófagos a menudo produce también un estallido Como los macrófagos, su superficie contiene recep­ de resistencia contra estos artrópodos.
aparte de ser complementarios con su propia compo­ respiratorio (respiratory burst) en la cual el oxígeno tores para la porción caudal(Fe) de las Igs y para los
sición en aminoácidos, están conjugados con proteí­ molecular(02) es reducido al anión superóxido(Oi-) componentes C3b y C4 del complemento. Secrecio­ Los mastocitos. Son células pleomórficas del te­
nas de clase I(restricción de clase 1). Las células TC que es extremadamente tóxico para los parásitos. nes producidas por macrófagos, linfocitos T, y mas­ jido conjuntivo. En la práctica, los mastocitos se
generalmente poseen el CDS+ en su superficie. Los Este anión es producido en las membranas del fago­ tocitos, los complejos antígeno-anticuerpo, el factor comportan como la contrapartida tisular de los basó­
epítopos que reaccionan con los RCT de los linfoci­ soma y en las membranas externas del macrófago de C5a del complemento, la IL-5, y moléculas de ori­ filos circulantes. Como los basófilos, los mastocitos
tos TC tienen unos 9 aminoácidos de largo y son manera que puede ser vertido dentro del fagosoma gen parasitario pueden aceleran la maduración de fijan la IgE con muy alta afinidad y son degranula­
diferentes de los epítopos para las células B o Tco. para actuar contra los parásitos intracelulares, o al los eosinófilos de la médula roja y su pasaje a la dos por la aglomeración de estas Igs cuando ellas se
e) Linfocitos T supresores (TS). Estas células exterior para actuar contra los parásitos extracelula­ sangre, atraerlos a la localización del parásito, esti­ combinan con sus antígenos específicos. Los gránu­
fueron postuladas para explicar la inhibición de la res. A partir del anión superóxido, se pueden formar mular su extravasación para fonnar focos de infiltra­ los·de los mastocitos contienen una serie de sustan­
respuesta inmune bajo diversas circunstancias pero también otros radicales de oxígeno como peróxido ción tisular, y aumentar su capacidad de fagocitar, cias que producen vasodilatación y aumento de la
nunca han sido aisladas o clonadas. Esta inhibición de hidrógeno(H2O2), hidroxilo(HO), y ácido hipo­ liberar proteínas, y producir radicales oxidantes. Los permeabilidad vascular (histamina, leucotrienos,
podría ser simplemente una función de las células cloroso(HOCl). Estas son poderosas sustancias oxi­ eosinófilos pueden afectar a los parásitos mediante prostaglandinas, factor activador de las plaquetas
Tco bajo circunstancias especiales. Se sabe, por ejem­ dantes que también tienen la capacidad de destruir la liberación de proteínas básicas(particularmente la [FAP], otras que específicamente estimulan y/o atraen
plo, que las células Tcol y Tco2 son mutuamente los parásitos. Aparte de los radicales de oxígeno, se proteína básica principal) contenidas en sus gránu­ neutrófilos, eosinófilos y macrófagos(factores que­
antagonistas y se inhiben la unas a las otras. ha encontrado últimamente que el macrófago activa­ los, que son tóxicas para las membranas de varios motácticos para neutrófilos [FQN], para eosinófilos
d) Células nulas. Estas células tienen la morfo­ do también puede producir óxido nítrico (NO-) a parásitos(y, ocasionalmente, para las del hospede­ [FQE], y F AP que atrae neutrófilos, eosinófilos y
logía de los linfocitos pero carecen de los marcado­ partir de la L-arginina. El óxido nítrico por sí mismo ro). También pueden producir radicales de oxígeno macrófagos), y una serie de citocinas(!Ls 3, 4, 5, 6,
res de superficie de las células B o T. Algunas de es tóxico para muchos parásitos pero, además, se Y, posiblemente de nitrógeno, como los macrófagos. 8, factor estimulador de colonias de granulocitos y
ellas corresponden a las células asesinas naturales. puede combinar con el anión superóxido para formar Los eosinófilos intervienen también en el control de macrófagos [FEC-GM], e interferón y .[IFNy]). La
Otras pueden ser simplemente linfocitos inmaduros. radicales aún más reactivos como el bióxido de nitró­ las reacciones inflamatorias inhibiendo con sus en­ degranulación de los mastocitos en la proximidad del
Los macrófagos. Los macrófagos tisulares son geno(NO2) y el ácido nitroso(HNO2). Los radicales zimas los mediadores de la anafilaxis producidos por parásito, por lo tanto, constituye un foco inflamato-
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72 PARAS/TOLOGIA MEDICA JNMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 73 ,¡


río rico en proteínas plasmáticas (anticuerpos y com­ Promueve la proliferación de linfocitos B y T estimu­ penneabilidad vascular y la extravasación de células antígenos. Estos son comúnmente liberados cuando
plemento) y células (macrófagos, neutrófilos y eosi­ lados por un antígeno; favorece la diferenciación de sanguíneas, y es largamente el responsable por la el parásito muere y su cuerpo se degrada. Muchos
nófilos). Muchos especialistas opinan que los mas­ los linfocitos B hacia plasmocitos productores de caquexia de las enfermedades inflamatorias cróni­ parásitos poseen también sustancias antigénicas que
tocitos juegan un rol central en la defensa contra las anticuerpos; estimula la producción de IgE (o su cas. El segundo contribuye al aumento de las fago­ están ampliamente repartidas en la naturaleza (antí­
infecciones por helmintos. equivalente, lgGI en ratones e IgG2a en ratas); esti­ citosis por macrófagos y neutrófilos durante el pro­ genos heterófilos). Finalmente, los parásitos pueden ,,'1
1
mula la proliferación de los mastocitos; aumenta la ceso inflamatorio. alterar las proteínas del huésped durante la infección
Las citocinas producción de moléculas de histocompatibilidad de de tal manera que se hacen antigénicas para el mismo
clase II en los macrófagos y linfocitos B; e inhibe la Interferón (IFN-y). Los tres tipos de interferones hospedero. De todas estas sustancias, es probable
1;
Las citocinas son proteínas de tamaño pequeño o formación de los linfocitos cooperadores de tipo l . que han sido descritos (a, 8, y) inhiben la replicación que sólo los antígenos i:netabólicos contengan ma­
mediano (alrededor de 30 kDa) producidas por cé­ L a IL-4 e s e l principal efector d e las células Tco2. de virus pero el interferón y tiene, además, funciones teriales que son esenciales para la vida del parásito.
lulas y que influyen las funciones de otras células. muy importantes en la regulación inmune. El IFN-y La neutralización inmune de estas sustancias es
Generalmente son producidas en cantidades minús­ Interleucina 5 (IL-5). Es producida por las cé­ es producido por las células Tcol, TC, y células probablemente letal para el parásito. Pero estos an­
culas, actúan sólo en la vecindad inmediata donde se lulas Tco0 y Tco2. Estimula la multiplicación y ma­ asesinas naturales. Estimula la actividad de los ma­ tígenos deben competir con todos los otros antíge­
producen, y tienen una vida media de minutos. Cons­ duración de los eosinófilos; coopera con la IL-4 para crófagos y otras células fagocitarias, de las células nos del parásito por la atención del sistema inmune.
tituyen un verdadero sistema honnonal a nivel de las inducir la producción de lgE; promueve la multipli­ TC, y de las células asesinas naturales; aumenta la Corno generalmente están menos concentrados y
células. Las primeras citocinas descubiertas fueron cación de los linfocitos B y su diferenciación hacia producción de proteínas de histocompatibilidad de son más similares a los materiales del hospedero (de
aquellas producidas por linfocitos y se les llamó la producción de lgA. clases I y II; estimula la diferenciación de los linfo­ modo que son menos inmunogénicos) que los otros
interleucinas. Luego se encontraron citocinas produ­ citos B de ratón hacia la producción de lgG2 e lgG3 antígenos, raramente inducen respuestas inmunes
cidas por los macrófagos/monocitos y se les llamó Interleucina 6 (IL-6). Es producida por los ma­ (lgs no alergizantes); e inhibe la multiplicación de los de magnitud, de manera que el parásito se mantiene
monocinas. Como ahora se sabe que el fenómeno de crófagos, endoteliocitos, fibroblastos y células Tco2. linfocitos Tco2. El IFNy es el principal efector de las a salvo de la inmunidad protectora.
producción de estas hormonas celulares se extiende Aumenta la permeabilidad vascular; promueve la células Tcol y la contrapartida de la IL-4.
a muchas células, hoy se prefiere el nombre genérico multiplicación y maduración de linfocitos B; estimu­ Complejidad fisiológica. Como los parásitos
de citocinas aunque el apelativo interleucina (o IL) la la producción de proteínas de fase aguda por los poseen una fisiología más compleja que los proca­
ha resultado sorprendentemente persistente. Las ci­ hepatocitos. n LA RESPUESTA INMUNE - riotes, tienen más alternativas para eludir la acción
tocinas más relevantes a la inmunidad contra parási­ Y SU EFECTO SOBRE LOS PARASITOS efectora de la inmunidad. Por ejemplo, algunos ne­
tos S!Jn las siguientes: Interleucina 8 (IL-8). El efecto atribuido a una matodos pueden tener diferentes versiones de una
hipotética interleucina 8 es realmente ejercido por Diferencias entre la inmunidad enzima (isozimas). Si se producen anticuerpos con­
lnterleucina 1 (IL-1). Es producida par las CPAs una serie de sustancias cercanamente relacionadas contra parásitos y procariotes tra una versión, el parásito puede restringir su pro­
cuando son activadas, y por muchas otras células que ahora se denominan quemocinas. Son produci­ ducción en favor de otra versión que no sea afectada
cuando son dañadas (macrófagos, monocitos, endo­ das por los macrófagos y endoteliocitos. Diferentes La inmunidad es un conjunto de reacciones au­ por la inmunidad. Este fenómeno ha sido observado
teliocitos, fibroblastos, linfocitos B, etc.). Exhibe quemocinas estimulan la proliferación, extravasa­ tomáticas que siguen un curso similar con indepen­ en Nippostrongylus brasiliensis.
una serie de funciones, por ejemplo: promueve la ción, quem!)taxis y degranulación de basófilos y dencia del origen del antígeno. Si el mismo antígeno
producción de IL-2 y de receptores de IL-2 en los eosinófilos. es administrado de la misma manera a individuos Complejidad estructural. Debido a su tamaño··
linfocitos cooperadores; estimula la multiplicación y idénticos, la inmunidad obtenida debería ser compa­ y a la complejidad de sus estructuras, los parásitos
la maduración de los linfocitos B; aumenta la activi­ Interleucina 9 (IL-9). Es producida por las cé­ rable. La simple observación, sin embargo, indica son menos susceptibles a mecanismos efectores que
dad de las células asesinas naturales; atrae macrófa­ lulas Tco y Tco2. Promueve el desarrollo de los que existen diferencias marcadas entre el efecto de tienen éxito contra procariotes. Por ejemplo, la neu­
gos-monocitos y neutrófilos; promueve la permeabi­ mastocitos y la proliferación de células TC en ausen­ la inmunidad sobre virus y bacterias (organismos tralización efectiva de los receptores que usa un
lidad vascular; aumenta la producción de moléculas cia de antígeno. Inhibe la producción de proteínas de procariotes) o sobre parásitos (organismos eucario­ protozoo para adherirse a su célula hospedera pro­
de adherencia intercelular por los endoteliocitos; clases II por los macrófagos. tes). Las infecciones virales y bacterianas son por lo bablemente requiere muchas más moléculas de anti­
induce la producción de proteínas de fase aguda por general procesos agudos que se resuelven o matan cuerpo que la neutralización de los receptores de un
el hígado y de prostaglandinas y ACTH por el hipo­ Interleucina 10 (IL-10). Es producida por los al paciente rápidamente. En contraste, las infeccio­ virus o una bacteria. El complemento probablemen­
tálamo. macrófagos y las células Tco2. Inhibe la producción nes parasitarias son característicamente procesos te requiere también muchas más moléculas para lisar
de IL-1, IL-6, FNT e IFN. crónicos. Esta dramática diferencia depende de cier­ un protozoo que para lisar un procariote, y probable­
Interleucina 2 (IL-2). Es producida por las célu­ tas características biológicas de los parásitos que mente no funciona contra helmintos que pueden re­
las TcoP, Tco0, y Tco l. Promueve la activación y Interleucina 12 (IL-12). Es producida por las están ausentes en. los procariotes. parar su cubierta tan rápidamente como el comple­
multiplicación de los linfocitos Tco, TC, y B estimu­ CPA. Promueve la formación de células Tco I y TC, mento la daña. La fagocitosis, que es tan exitosa
lados por un antigeno y aumenta la actividad de los y la producción de IFN por los linfocitos y células Complejidad antigénica. Los parásitos producen contra muchas bacterias, probablemente no tenga
macrófagos y células asesinas naturales. asesinas naturales. Inhibe la formación de células antigenos químicamente más complejos y en mayor ningún efecto sobre los helmintos. Aun cuando pa­
Tco2. número y cantidad que los organismos procariotes. rásitos moribundos pudieran liberar enzimas esen­
Interleucina 3 (IL-3). Es producida por las cé­ Aquellos antígenos que se generan del metabolismo ciales para el parásito y el hospedero pudiera produ­
lulas Tco0, Tcol y Tco2. Estimula la multiplicación Factor de necrosis tumoral (FNT). Un tipo (a, del parásito se llaman antígenos metabólicos, de cir anticuerpos contra ellas, los anticuerpos dificil­
y maduración de todas las células hematopoyéticas, antiguamente llamada caquexina) es producido por excreción-secreción (ES), o exo-antígenos. Estos son mente podrían llegar al lugar de acción de la enzima
incluyendo los mastocitos. los macrófagos y otro (B, antiguamente llamado lin- generalmente enzimas o catabolitos generados por el en el espesor de los tejidos del parásito vivo. Si los
, fiitoxina) por las células Tea I yTC.'Ambos causan.··-. parásito vivo y floreciente. Aquellos antigenos que macrófagos o anticuerpos ganaran acc_eso al parási­
Interleucina 4 (IL-4). Es producida por las célu­ necrosis de ciertas células tumorales. El prime�o '" .... derivan de las estructuras del cuerpo del parásito se to por la vía-digestiva,·probablemenié seríán digeri­
las Tco0, Tco2, los neutrófilos, y los mastocitos. estimula la producción de IL-1 e IL-6, promueve la llaman antígenos somáticos, estructurales, o endo- dos antes de poder causar daño importante.
PARAS/TOLOGIA MEDICA !NMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 75
• 74


Complejidad biológica. Los nematodos penetran puestas inmunes son generalmente desviadas hacia

(12(@)
2�1�@)
sus hospederos como larvas infectantes y proceden los antígenos más potentes que no son protectores.
a desarrollarse hasta el estado adulto. Los estadios Por otro lado, la liberación de antígenos en las mu­
juveniles generalmente poseen una bioquímica ca� cosas induce la producción preferencial de IgA que

. ·. N··\J·
.lJ· .
..
1 Ig ; 9
racterística y antígenos diferentes de los del adulto. no activa el complemento o promueve la fagocitosis.
Para el tiempo que el sistema inmune reacciona a Los anticuerpos lgA actúan mediante la ocupación
estos antígenos, el parásito juvenil ya ha mudado a competitiva de receptores que son necesarios para la
otro estadio que a menudo no es susceptible a e'sa que el patógeno se fije y penetre en la célula hospe­
inmunidad. Los formas juveniles y adultas de los dera. Dado que muchos parásitos son extracelulares
platihelmintos también exhiben diferencias antigé­ y algunos intracelulares entran en las células hospe­
nicas (ésta es la base de la inmunidad concomitante deras mediante procedimientos mecánicos o enzi­
en Scltistosoma) pero, además, los antígenos super­ máticos (que no requieren receptores), los anticuer­

� j)
ficiales de su tegumento se renuevan cada pocas pos IgA son poco efectivos para proteger contra los
horas de manera que los anticuerpos o células que se parásitos.
fijen en su superficie son eliminados antes de que
puedan causar daño permanente. Hipobiosis. Muchos parásitos pasan durante su
ciclo de vida en el hospedero por períodos de reduc­
®
Localización. Muchos parásitos están localiza­ ción metabólica o hipobiosis (larvas de Toxocara,
dos en el lumen digestivo donde el complemento es Ancylostoma, Strongyloides, Tricltinello, nematodos
inactivo y los anticuerpos IgM, IgG, macrófagos y gastrointestinales y respiratorios de los rumiantes,
otros elementos efectores de la inmunidad son esca­ Toxoplosma, T. cr11zi, Sarcocystis, en infecciones
sos. Otros parásitos están localizados dentro de cé­ crónicas). Debido a la reducción metabólica la pro­
lulas libres (Plasmodium, Babesia, Toxoplasma, etc.), ducción de antígenos es mínima durante estos perío­
que los protegen de la actividad de los anticuerpos. dos de manera que la respuesta inmune disminuye en
Otros están dentro de células de tejidos sólidos (quis­ gran medida. Por otra parte, cualquier mecanismo
tes de Tricltinella, Sarcocystis, Toxoplasma, T. cruzi, inmune efector que actúe sobre pasos metabólicos
etc.),que los protegen, además, de la fagocitosis. Por será mucho menos efectivo en esa oportunidad. REFERENCIAS:
último, otros se rodean de una capa de tejido fibroso C' =COMPLEMENTO M0=MACROFAGO
formada por el huésped (larvas de cestodos) que Modulación de la inmunidad. Por último,debido
impide el paso a los elementos de la inmunidad,o se a su mayor complejidad biológica, los parásitos po­ CA=CELULA ASESINA N =NEUTROFILO
encuentran en órganos que están protegidos de la seen potencialidades para modificar, manipular o Figura 5-2. Efectores de la inmu­ Eo =EOSINOFILO P =PARASITO
inmunidad (Toxoplasma y T. cr11zi en el feto, Cysti­ escapar de la inmunidad de maneras que a los pro­ nidad contra protozoos. lg =ANTICUERPO TC =LINF. CITOTOXIC()
cercus cel/ulosae en el cerebro, larva de Toxocara tocariotes les están vedadas.
canis en el ojo). Las diferencias en el efecto de la inmunidad so­
bre procariotes y parásitos, entonces, es sólo el re­
Movilidad. Muchos parásitos se mueven libre­ sultado lógico de las potencialidades biológicas que inespecificos que se producen inmediatamente des­ go, a un grupo relativamente homogéneo como son
mente dentro del organismo de modo que pueden posee cada clase de organismo para provocar y· pués de una infección se ha denominado respuesta las formas intestinales de los coccidios,la inmunidad
escapar fisicamente del lugar de infección,a menudo enfrentarse con la respuesta inmune. de fase aguda. Si estas reacciones no son capaces protectora producida por una infección previa es
dejando atrás una estela de antígenos. Para el tiempo de eliminar al invasor, entonces las respuestas inmu­ casi absoluta para Cryptosporidium, fuerte para
que la respuesta inmune local se hace efectiva, el La secuencia de reacciones inmunes nes toman control. Comúnmente, también las res­ Toxoplasma, moderada para Eimeria e Isospora, y
parásito ya se desplazó a otro lugar. Esto se obser­ en parasitología puestas inmunes proceden en cierta secuencia. casi nula para Sarcocystis. Esto demuestra la varie­
vaba frecuentemente en el caso de las larvas migran­ Es importante notar que los vertebrados usan dad de respuestas y la variedad de efectos de estas
tes cutáneas. La antigua prescripción de tratar el Clásicamente la inmunidad es un sistema de re­ diferentes estrategias para defenderse de las infec­ respuestas contra diversos parásitos.
extremo distal del surco inflamatorio de esta afección conocimiento específico de moléculas extrañas al <' ciones parasitarias: anticuerpos, citocinas, células
con una sustancia antihelmíntica rara vez daba resul­ organismo. Enfrentados a una infección, sin embar­ citotóxicas y otros mecanismos citotóxicos. Dado La respuesta de fase aguda. La presencia de
tado porque el parásito ya había avanzado algunos go, los vertebrados ponen en juego una serie de res­ que entre los parásitos existe una variedad de tama­ parásitos pequeños (protozoos) en el organismo es
centímetros para el tiempo que la inflamación se puestas específicas que son previas a las respuestas ños, fisiologías, localizaciones y capacidades de rápidamente detectada por los macrófagos que ini­
expresaba macroscópicamente. inmunes propiamente tales. El descubrimiento re­ evadir la respuesta inmune, los mecanismos efecto­ cian procesos de fagocitosis. La activación subse­
ciente de que las citocinas de la inmunidad tienen res son eficaces contra todos los parásitos. Por el cuente de los macrófagos acelera la fagocitosis e
Presentación de antígeno. Los parásitos común­ una participació•n trascendental en estos procesos contrario, esos mecanismos deben ser selecciona­ intensifica la degradación de los parásitos, pero no
mente producen una gran cantidad de antígenos al iniciales de la infección ha mitigado un poco la di­ dos de acuerdo al parásito en particular, a su estadio es indispensable para iniciar la actividad macrofági­
mismo tiempo, lo que promueve la competencia entre ferenciación entre procesos de defensas inespecífi­ evolutivo, a su localización y, probablemente, a su ca. En el caso de parásitos más grandes (helmintos),
estos antígenos por la atención del sistema inmune. cos y específicos. Es conveniente, de todas maneras, capacidad de manipular la respuesta inmune. Entre su sola actividad mecánica destruye células endote­
Como lo�. antígenos r�sp_oi;i,s,�!:¡!i:s por la protec­ considerar la secuencia de reacciones que e_\,CJrganis­ ' los protozoos, por ejemplo,el sistema inmune puede liales y fibroblastos y agrega las•plaquetas. Produc­
ción son poco·antigénicos '(de otni"inanera, los pará­ mo desenvuelve ante la invasión parasitaria, desde emplear hasta siete mecanismos diferentes de ataque tos del metabolismo de los protozoos y helmintos
sitos serían eliminados consistentemente), las res- el mismo principio de ella. La serie de fenómenos al parásito (Figura 5-2). Si consideramos, sin embar- seguramente también juegan un rol en la activación
']6 PARASITOLOGIA MEDICA JNMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 77

los maorófagos pueden ejercer funciones parasitolí­ devastadoras para el individuo (como se ve en las
ticas sin activación especifica previa y sugieren que enfermedades por autoinmunidad) que la naturaleza
lo mismo debe ocurrir en el foco inflamatorio de la ha hecho esfuerzos para asegurarse de que la res­
respuesta de fase aguda. puesta inmune esté bien regulada.
En previsión, sin embargo, de que esta respuesta En inmunología, activación de una célula signi­
pudiera ser insuficiente para eliminar al patógeno, la fica que la célula incrementa habilidades previas o
presencia de macrófagos y linfocitos en la zona per­ adquiere capacidades nuevas. En el caso de la CPA,
mite la iniciación muy precoz de una respuesta in­ la activación significa que esta célula empieza a
mune específica. Esta respuesta empieza con la ac­ secretar las citocinas ILs 1, 6 y 12. La IL-1 contribuye
tivación de los linfocitos TcoP, continúa con la ac­ a la activación del linfocito Tea, estimula la actividad
tivación de los linfocitos TcoO, y, probablemente, de los macrófagos, células asesinas naturales, mas­
después se especializa hacia una respuesta mediada tacitas y linfocitos B y contribuye a la respuesta de
por células o una respuesta humoral. fase aguda. La IL-6 contribuye a la activación del
Figura 5-3. La respuesta de linfocito Tco, promueve la proliferación y diferencia­
fase aguda. Las actividades me­ Activación de los linfocitos TcoP. Muchos de los ción de linfocitos B y contribuye a la respuesta de
cánicas y bioquímicas de los macrófagos reclutados durante la respuesta de fase fase aguda. La IL-12 estimula la actividad de las
parásitos al invadir los tejidos aguda son CPA. Estas células ingieren el parásito células asesinas naturales (Figura 5-4).
provocan la producción de i'l­ completo o sus proteínas y las digieren en pequeños El linfocito Tea que es estimulado por un epíto­
terleucinas 1, 6, 8, y de inter­ fragmentos (epítopos) en sus lisosomas. Aquellos po por primera vez es convencionalmente llamado
ferón por los endoteliocitos, epítopos (E) que encuentran en la CPA proteínas de linfocito Tea precursor (TcoP). La activación de las
macrófagos, fibroblastosy pla­ clase II (PII) con las cuales tienen cierta afinidad células TcoP resulta en la producción de IL-2 y en la
quetas. Estas citocinas pro­ química (las moléculas de clase I y II no son muy expresión de receptores para la IL-2 en la superficie
mueven la producción de un específicas) se combinan con ellas para formar com­ de las mismas células. Este es un ejemplo interesante
foco inflamatorio alrededor de plejos epítopo-proteína de clase II (E-PII) que migran de autoestimulación porque la IL-2 actúa sobre sus
los parásitos(!), actúan sobre a la superficie de la CPA. Cuando este complejo receptores específicos en la misma, o en otras célu­
el hipotálamo para generar fie­ encuentra a un linfocito Tea con un RCT comple­ las. La combinación de la IL-2 con sus receptores
bre·y la producción de corti­ REFERENCIAS: mentario en composición de aminoácidos a la suya estimula la multiplicación de las células TcoP y su
costeroides (2), provocan la C=CEREBRO N = NEUTROFILO propia, el E-PII se combina con el RCT correspon­ diferenciación hacia linfocitos Tea activados (TcoO)
síntesis de proteínas de fase E = ENDOTELIOCITO MO = MACROFAGO diente. Las proteínas CD3 y CD4 que rodean al RCT (Figura 5-4 ).
aguda por el hígado(3), y es­ estabilizan la combinación del RCT y ayudan en la La activación de los linfocitos TcoP ocurre den­
timulan a los linfocitos para H=HIGADO P =PARASITO transmisión de señales al interior del linfocito. Apar­ tro de los primeros dos días de la infección parasi­
iniciar una respuesta inmune. L =LINFOCITO R =RIÑON te de la combinación del complejo E-PII con el RCT taria y constituye simplemente el paso inicial de.
y sus proteínas asociadas, otra serie de proteínas de ampliación de la respuesta inmune. El fenómenó
la CPA (CD58, CD54 y CD22) se acoplan con proteí­ predominante en este momento es aún la promoción
nas correspondientes del linfocito Tea (CD2, CD l la/ de un foco de inflamación inespecífica (como en la
de estas células. La estimulación de los macrófagos, que ejerce diversas funciones defensivas) (Figura 5- CD18 y CD45) y refuerzan la unión entre las dos respuesta de fase aguda) pero ya se inicia la expan­
endoteliocitos, fibroblastos y plaquetas induce a 3). células y facilitan la transmisión de señales al interior sión de linfocitos TcoP y B que anuncia el comienzo 1·

estas células a producir una serie de moléculas ac­ Probablemente la respuesta de fase aguda es del linfocito. La combinación de los receptores de la de la reacción inmune específica.
tivas, siendo las más comunes ILs 1, 6, 8, y el FNT. suficiente por sí sola para destruir muchos patóge­ CPA y de los linfocitos es facilitada porque ambas
Estas moléculas, individual o colectivamente, esti­ nos, de los cuales nunca tomamos noticia. Hay una células residen en los mismos sitios (el infiltrado Activación de los linfocitos TcoO. Si, pese a la
mulan la producción y quimiotaxis de los neutrófilos, serie de ejemplos de la eficacia de estas respuestas inflamatorio en tomo al parásito, en el caso de pará­ respuesta inespecífica, el parásito (o sus antígenos)
linfocitos y macrófagos. Al mismo tiempo actúan inespecíficas. En cualquiera infección parasitaria sitos estacionarios, o los ganglios linfáticos, en el están presentes luego de un par de días, sus antíge­
sobre el endotelio vascular aumentando las molécu­ experimental, sólo una modesta proporción de los caso de parásitos circulantes) y porque los linfocitos nos tienen la oportunidad de estimular nuevamente
las de adhesión y la permeabilidad capilar, lo cual elementos infectantes se desarrolla; el resto es des­ recirculan en la sangre y la linfa. a los linfocitos TcoO que ya habían experimentado
favorece la marginación, extravasación e infiltración truido por las defensas inespecíficas del organismo. Estos múltiples contactos activan la CPA y son este contacto como TcoP. Esta vez, los linfocitos
local de estas células. El resultado final es la produc­ Los macrófagos peritoneales de hospederos natural­ necesarios, pero no suficientes, para activar el linfo­ TcoO responden con la producción de IFN e lLs 2,
ción de un infiltrado inflamatorio alrededor del pará­ mente resistentes al Squistosoma ma11s011i (conejos cito Tea. El linfocito aún necesita de un par de co­ 3, 4, 5, 9 y 10. El IFN activa los macrófagos/monoci­
sito (u otro patógeno invasor con abundancia de y ratas) matan los schistosomulas sin necesitar ac­ estímulos. Estos son: la acción de las citocinas IL-1 tos, células asesinas naturales, y linfocitos TC que
células fagocitarlas (neutrófilos y macrófagos), fac­ tivación previa. Los macrófagos de ratones suscep­ y IL-6 producidas por la CPA activada, y la unión de se consideran elementos efectores de la inmunidad
tores plasmáticos (complemento, lisozima, etc.) y tibles a Plasmodium, Babesia, Trypanosoma cnizi, la proteína de superficie B7 de la CPA con las pro­ mediada por células (Figura 5-5). La IL-2 estimula la
células inmunes (CPAs y linfocitos). En infecciones Leislzmania majar o Squistosoma ma11soni matan teínas de superficie CD28 o CTLA4 del linfocito. proliferación y activación de macrófagos/monoci­
generalizadas como sarcocistosis, estas linfocinas también a los parásitos respectivos cuando son ac­ Cuando todos estos requisitos se cumplen, el linfo­ tos, células asesinas naturales y linfocitos. La IL-3
también provocan· efectos sistémicos como la pro­ tivados inespecíficamente mediante inyecciones de cito Tea es activado. Esta complicada secuencia de estimula todas las células hematópoyéticas. Las lLs
:: --··.. ducción de,prostaglandinas (que causan fiebre), de BCG. Los macrófagos de humanos infectados conT. .tiv.eIJtos necesaria para activar los linfocitos Tea es 4, 5 y 9 estimulan la producción de anticuerpo�,
ACTH ( que liberan corticosteroides), y de proteínas gondii también son capaces de destruir los squisto­ caraé:teristica de la respuesta inmune. Las conse­ eosinófilos y mastocitos (estas célula� se consideran
hepáticas de fase aguda (como la proteína C·reactiva, sómulas de S. manso11i. Estos reportes indican que cuencias de una inmunidad desbocada serían tan elementos efectores de la inmunidad humoral). El
78 PARASITOLOGIA MEDICA
Í'
' '

INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 79


1
i

REFERENCIAS:
EÓ = E OSINOFILO TC = LINFOCITO T CITOTOXICO
REFERENCIAS: IFN= INTERFERON Tcol = LINFOCITO T TIPO 1
B = LINFOCITO B P =PARASITO L = LINFOCITO Tco2·= LINFOCITO T TIPO 2
CA = CELULA ASESINA PII = PROTEINA DE CLASE 11 N =NEUTROFILO (VEASE TAMBIEN FIGURA 4)
CPA = CELULA PROCESADORA RCT = RECEPTOR DE CELULAS T
DE ANTIGENO T = LINFOCITO T
Figura 5-4. Activación de E =EPITOPO Tco0 = LINFOCITO COOPE­
los Jinfocitos T cooperado­ IL- = CITOQUINA RADOR ACTIVADO
res precursores. M0 =MACROFAGO TcoP = LINFOCITO COOPE­ Figura 5-5. Activación de los linfocitos T cooperadores activados. Cuando los linfocitos TcoO reencuentran el epítopo
M =.MASTOCITO RADOR PRECURSOR específico empiezan a secretar interferón (IFN) e interleucinas (IL) 2, 3, 4, 5, 9 y 10. Las tres primeras estimulan células
efectoras de la respuesta mediada por células (macrófagos [MO), células asesinas (CA], y linfocitos T citotóxicos [TC])
mientras que las !Ls 3, 4, 5 y 9 estimulan células efectoras de la respuesta humoral (linfocitos B [B), mastocitos [M],
IFN y la IL-1O, además, son elementos de balance: el (Figura 5-6A). Las células Tco2, en cambio, produ­ neutrófilos [N], y eosinófilos (Eo]). El IFN y la IL-10 son mutuamente inhibitorios. Reencuentros con el epítopo
primero promueve el desarrollo de las células Tcol cen ILs 4, 5, 6, 9 y 10 que son activadoras de la respectivo estimulan la proliferación y diferenciación de los linfocitos TcoO hacia linfocitos T cooperadores de tipo l..
y el segundo el de las células Tco2. Además, ambos inmunidad humoral (linfocitos B, lgG, lgE, lgA, mas­ o 2 (Tco I o Tco2).
se inhiben mutuamente. tocitos y eosinófilos) e inhibidoras de la inmunidad
La activación de las células TcoO parece ser un mediada por células (células Tco1, macrófagos, IFN
paso intermediario de organización de la respuesta y FNT) (Figura 5-6B). Ambos tipos de linfocitos
inmune y el primer ataque especifico contra el pará­ producen también IL-3 que mantiene el reclutamien­ el contrario, las ILs 3, 4, 5 y 9 de los linfocitos Tco2 Efecto de las citocinas de los linfocitos Tea 1 en
sito. Aunque aún se observa una estimulación gene­ to de células hematopoyéticas durante la respuesta son importantes en la generación de mastocitos, IgE el parasitismo intracelular. Como comentábamos
ralizada de las células inmunes (mediante las !Ls-2 inmune. Las células Tcol y Tco2 no sólo son media­ y eosinófilos que son importantes en la defensa arriba, estas citocinas parecen ser particularmente
y 3 ), ya existe la estiniulación concurrente pero es­ doras de modalidades diferentes de la respuesta contra helmintos. Parece, por lo tanto, que los linfo­ efectivas contra el parasitismo intracelular. Hay un
pecífica de la inmunidad mediada por células (me­ inmune sino que, además, son mutuamente inhibito­ citos Tco1 están particularmente asociados a la de­ número de ejemplos que ilustran este efecto:
diante el IFN y la IL-2) y de la inmunidad humoral rias. Una vez que el parásito ha sido eliminado y la fensa contra el parasitismo intracelular mientras que - La inyección de IFN o del FNT en ratones
(mediante las lLs 4, 5 y 9). estimulación por sus antígenos cesa, las células T los linfocitos Tco2 están especialmente relaciona­ infectados con Leishmania majar estimula a los
revierten a células de memoria (TM). Los linfocitos dos con el parasitismo extracelular por helmintos. macrófagos a producir radicales de oxígeno libre
Diferenciación de los linfocitos Tcol y Tco2. Si TM son células de larga vida, muy susceptibles a la El rol de las citocinas en infecciones parasitarias que matan al parásito dentro del macrófago: Por el
el parásito (o sus antígenos) aún están presentes estimulación antigénica y que producen sólo IL-2 se ha estudiado por tres métodos principales: 1. contrario, la inyección de IL-4 (inhibidor de las cé­
hacia el final de la primera semana de infección, sus (como amplificadora de la respuesta inmune) cuan­ Mediante inoculación de la citocina al comienzo o lulas Tco1) previene la activación de los rnacrófagos
antígenos tienen la oportunidad de reestimular las do son reestimuladas por su antígeno específico. durante el curso de la infección. 2. Reduciendo los y determina una leishmaniasis diseminada que final­
células TcoO. Esta estimulación crónica provoca la niveles circulantes de la citocina mediante la inyec­ mente mata al ratón.
diferenciación de los linfocitos TcoO en una de dos Rol de las citocinas en las infecciones parasita­ ción de su anticuerpo específico. 3. Trabajando con - La neutralización del IFN con inyecciones de
direcciones: hacia linfocitos Tco tipo 1 (Tcol ) o rias. Las citocinas tienen funciones reguladoras y cepas de ratones que producen preferentemente una anticuerpos específicos ha demostrado que esta cito­
hacia linfocitos Tco tipo 2 (Tco2). Las células Tcol efectoras en la respuesta inmune. Por ejemplo, la IL- u otra citocina. La observación de los cambios pro­ cina protege contra parásitos intracelulares de célu­
producen IFNy, IL-2 y FNTB que son activadores de 2, el IFN y el FNT de los linfocitos Tcol son activa­ ducidos por estos tratamientos en comparación con las que no son necesariamente macrófagos, tales
la inmunidad mediada porcélulas (macrófagos;<célu­ dores de los macrófagos, linfocitos TC y células una infección normal han permitido:inferir el rol de como Eimeria, Toxoplasma y Cryptosporidium. Los
las asesinas naturales, linfocitos TC) e inhibidores asesinas naturales. Estas células, a su vez, son efec­ la citocina respectiva. linfocitos de pollos infectados c9n Eimeria lene/la
de la inmunidad humoral (linfocitos B y células Tco2) tivas para combatir el parasitismo intracelular. Por producen IFN cuando son estimulados con antíge-
so PARASITOLOGIA MEDICA INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 81

acciones sugiere que el IFN facilita la ingestión y


destrucción de los parásitos unicelulares (Figura 5-7).
Ratones y pollos han mostrado un notable paralelis­
mo entre la producción de radicales de oxígeno por
las células intestinales y la resistencia contra las in­
fecciones con Eimeria. Estos radicales son también
@)(@® tóxicos para Eimeria in vitro lo cual es sugestivo
porque este parásito es relativamente deficiente en
las enzimas dismutasa superóxido y catalasa, que
@@) pueden detoxificar los radicales. La mortalidad de
Leishmania, Schistosoma y E. 11111/tilac11/aris, la
expulsión de Nippostrongy/11s brasiliensis del intes­
tino y la resistencia contra Fasciola hepatica han
sido todas relacionadas con la producción de óxido
nítrico por células parasitarias o células en la vecin­
dad del parásito. Los radicales de oxígeno y/o de
nitrógeno pueden inactivar los parásitos directamen­
te, degradar sus ácidos nucleicos o generar carboni­
los que son tóxicos para las membranas parasitarias.
Aparte de estos radicales, deben existir otros me­
canismos para la acción letal del IFN porque esta
citocina es capaz de inhibir in vitro el desarrollo de
REFERENCIAS: Eimeria o Plas111odi11m aun en la ausencia de pro­
C' =COMPLEMENTO, FNT = FACTOR DE NECROSIS TUMORAL ducción de radicales oxidantes por las células hos­
(VEANSE TAMBIEN FIGURAS 4 Y 5) pederas. Cualquiera que sea este mecanismo, parece
actuar más sobre las células hospederas que sobre
los parásitos porque los parásitos intracelulares son
Figurn 5-6. Activación de los linfocitos T cooperadores de tipo I ó 2. El reencuentro de los linfocitos T cooperadores inhibidos pero los esporozoitos extracelulares son
Figura 5-7. Acción del interferón contra los parásitos. La
de tipo I (Tco I) con su epítopo respectivo estimula la secreción de inteiferón (IFN), interleucina 2 (IL-2), y factor de poco afectados.
estimulación de los linfocitos cooperadores de tipo I
necrosis tumoral (FNT). Estas citocinas promueven la actividad de las células efectoras de la inmunidad mediada por Hay también evidencias claras de que el IFN
(Tco 1) por epitopos del parásito (P) promueve la produc­
células (macrófagos [MO], células asesinas [CA], y linfocitos T citotóxicos [TC]). El reencuentro de los linfocitos T inhibe la IL-4 y viceversa. Ratones C57BL/6, que
ción de ínteiferón (IFN) y otras citocinas. El IFN, a su vez,
cooperadores de tipo 2 (Tco2) con su epitopo respectivo estimula la secre_ción de interleucinas (IL) 4, 5, 6, 9 y IO. Estas normalmente responden a la infección con L. majar
estimula la actividad de los linfocitos T citotóxicos (TC),
cítocinas promueven la actividad de las células efectoras de la inmunidad mediada por anticuerpos (linfocitos B [B], con producción de IFN y desarrollan lesiones loca­ macrófagos (MO), neutrófilos (N), y células as!lsinas
mastocitos [M], y eosinófilos [Eol] y la acumulación de inmunoglobulinas (lgs) y complemento (C'). les transitorias, sufren una infección diseminada y naturales (CA), y la producción de anticuerpos clásicos
producen niveles aumentados de IL-4 y de IgE cuan­ (lgM e lgG) por los linfocitos B (B). Los linfocitos TC
do se les trata con anticuerpos contra el IFN. Contra­ actúan mediante citocinas contra células parasitarias que
riamente, ratones BALB/c, que típicamente secretan expresan neoantígenos, o células que absorben antígenos
nos específicos. Además, la presencia del IFN inhibe parcialmente la protección otorgada por la vacuna. IL-4 contra L. majar y desarrollan una enfermedad parasitarios circulantes. Los M0 y N se fijan sobre los
la invasión de las células hospederas por los esporo­ Los ratones que responden a una infección de Tri­ diseminada, empiezan a producir IFN y eliminan la parásitos mediante los anticuerpos que recubren al pará­
zoitos y el desarrollo de los parásitos en cultivos de chinella con proliferación de linfocitos Tcol expul­ infección cuando son tratados con anticuerpo contra sito y los fagocitan (en el caso de los macrófagos), o los
células. Los ratones BALB/c, que son normalmente san los parásitos de un desafio más rápido que los la IL-4. destruyen mediante la producción de radicales oxidantes
resistentes a la Eimeria vermiformis, muestran un ratones que no demuestran proliferación de células (02-, NO-) o la liberación de enzimas o de las proteínas
aumento en la producción de oocistos, de la pérdida Tco 1. Los macrófagos activados con IFN matan los Efeclo de las citocinas de los li11focitos Tco2 en citotóxicas de sus gránulos. La acción de las CA contra los
de peso y de la mortalidad cuando sus niveles circu­ escolices de Eclzinococc11s m11ltiloc11laris in vitro el parasitismo por helminlos. Diferentes de los pro­ parásitos no es bien entendida en la actualidad.
lantes de IFN son deprimidos con inyecciones de mediante la producción de radicales de nitrógeno. tozoos, los helmintos presentan al sistema inmune
anticuerpos específicos. Un efecto protector similar El mecanismo de acción del IFN sobre los pará­ superficies grandes que no pueden ser fagocitadas.
del IFN ha sido demostrado en tripanosomiasis, sitos no se conoce aún. Se sabe, sin embargo, que Muchos autores opinan que los anticuerpos anafilác­ de las Igs E o G que están combinadas específica­
malaria, toxoplasmosis y criptosporidiosis experimen­ promueve la producción de anticuerpos no alergi­ ticos, los mastocitos y los eosinófilos evolucionaron mente con los parásitos. Seguidamente, los gránulos
tales. zantes y la activación de macrófagos y neutrófilos, como una respuesta defensiva contra los parásitos del eosinófilo que contienen proteínas básicas se
- Hay alguna evidencia de que las citocinas de pero que no es tóxico para los parásitos por sí mis­ multicelulares. Estos elementos efectores son esti­ vierten al exterior y las proteínas destruyen las mem­
los linfocitos Tcol pueden proteger también contra mo. Los anticuerpos clásicos so_n opsoninas muy mulados por las citocinas de las células Tco2. Hay branas parasitarias externas y matan al parásito. Este
algunas infecciones por helmintos. Existe una corre­ efectivas que facilitan la fagocitosis por macrófagos numerosos ejemplos de que estas citocinas prote­ efecto es neutralizado por tratamiento de los anima­
lación estrecha, por ejemplo, entre los niveles de IFN y neutrófilos. Por otra parte, la presencia de IFN está gen contra infecciones por helmintos: les infectados con anticuerpos contra los eosínófi-
y la protección producida,por una vacuna irradiada frecuentemente asociada con la producción de radi­ .. - Lo� ..eosiQQfilos se pueden adherir a la super­ los o contra la IL-5. ,,, . , .,
contra Schistosoma ñiansoni en ratones. El trata­ cales de oxígeno o de.nitrógeno por los macrófagos, ficie de Trichinella spiralis, Schistosoma, u otros - Los ratones comúnmente sufren infecdóñes
miento de los ratones con anticuerpo anti-IFN inhibe neutrófilos y eosinófilos. La combinación de estas helmintos mediante fijación a la porción caudal (Fe) crónicas luego de una primera exposición al trichos-
T
8-2 PARASITOlOGIA MEDICA
<¡ INMUNOlOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 83

l. INFLAMACION INICIAL INESPECIFICA trongilideo Heligmosomoides polygyrus (Nematos­ 3. Los anticuerpos anafilácticos se combinan con
., piroides dubius) pero desarrollan consistentemente los mastocitos por sus receptores Fe y con epítopos
·1 resistencia contra las reinfecciones. La neutraliza­ del parásito por sus lugares de combinación con el
ción de la IL-4 o de sus receptores, mediante inyec­ antígeno. La aglomeración de las lgs anafilácticas
ciones de sus anticuerpos específicos, inhibe la in­ sobre los mastocitos desencadena la degranulación
munidad contra las reinfecciones. La inyección de de estas células con liberación de mediadores de la
IFN (que inhibe la IL-4) también disminuye la habi­ hipersensibilidad de tipo I.
lidad del hospedero para limitar la infección prima­ 4. Estos mediadores inducen un aumento de la
ria. permeabilidad vascular ( que significa el influjo de
1
1,
r,
- El tratamiento de ratones infectados con Stron­ más anticuerpos circulantes y complemento) y atraen
gyloides o Angiostrongylus cantonensis con anti­ y activan eosinófilos, neutrófilos y macrófagos. En
2. INFLAMACION DE ORIGEN INMUNE cuerpos contra IL-5 o sus receptores inhibe la res­ el caso de los parásitos de los lúmenes digestivo o
� puesta eosinofilica y favorece la sobrevida de las respiratorio, la sola inflamación local puede formar

�-0��=:i.
Wdl� larvas de los nematodos en los pulmones o el cere­ un ambiente bioquímicamente tan inhóspito para el
� bro. parásito que éste puede desprenderse y ser expulsa­
- Los ratones BALB/k responden a la infección do.
con Tric/mris muris con proliferación de células Tco2 5. El complemento es activado por la vía alterna­
y eliminan rápidamente los parásitos del intestino. tiva por materiales parasitarios y proteasas de los
Los ratones B I O.BR, por el contrario, responden con mastocitos y por la vía clásica por los complejos
� �� proliferación de las células Tco I y desarrollan infec­ antígeno-anticuerpo. Los anticuerpos y factores del
� ciones crónicas. El tratamiento de estos últimos ra­ complemento se depositan sobre el parásito y cons­
3. DEGRANULACION DE MASTOCITOS 4. INFLUJO DE CELULAS Y PLASMA tones con anticuerpos contra IFN disminuye la carga tituyen puentes para que los eosinófilos, neutrófilos
parasitaria. y macrófagos se adhieran al parásito. Una vez en
- Las infecciones con Hymeno/epis nana en ra­ estrecho contacto con él, estas células vierten sobre
1 tones inducen la producción de lgE y la infiltración el parásito radicales oxidantes que alteran sus molé­
local por mastocitos. El parásito es comúnmente culas y proteínas que ejercen un efecto lítico sobre
expulsado espontáneamente en 2 a 5 semanas. La sus membranas externas.
abrogación de la producción de IgE o dé mastocitos, 6. El mecanismo de resolución de la inflamación
sin embargo, demora la expulsión aunque no la sus­ una vez que el parásito ha sido destruido tampoco se
5. LISIS DEL PARASITO 6. RESOLUCION DE LA ANAFILAXIA
pende totalmente. conoce en detalle, pero se sabe que los eosinófilos
El mecanismo de acción de las citocinas de las fagocitan los complejos anticuerpo anafiláctico-an­
células Tco2 contra los helmintos no se conoce com­ tígeno y secretan sustancias que neutralizan muchos
pletamente pero los resultados de múltiples experi­ de los mediadores de la anafilaxia producidos por los·
mentos y observaciones clínicas sugieren que los mastocitos.
eventos ocurren en la siguiente secuencia (Figura Alguna literatura parasitológica enfatiza el rol de
5-8): los eosinófilos y de los anticuerpos IgE en la des­
REFERENCIAS: l. Al comienzo de la infección, las actividades trucción de los helmintos. Aunque es efectivo que
físicas y bioquímicas del helminto en los tejidos los eosinófilos y la IgE intervienen en la protección
�( ANTICUERPO l!ldJ CITOQUINA � NEUTROFILO provocan una respuesta de fase aguda con acumula­ contra muchos parásitos (Schistosoma, Trichinel/a,
C' COMPLEMENTO � EOSINOFILO _/ HELMINTO
ción local de componentes plasmáticos (complemen­ y Trypanosoma cruzi, por ejemplo), en los últimos

® LINFOCITO D ® MACROFAGO © LINFOCITO T


to) y de células (macrófagos, linfocitos y neutrófi­
los).
años se han comunicado numerosas instancias de
neutrófilos o macrófagos que se adhieren a los hel­
# ENDOTELIOCITO @ MASTOCITO
2. A continuación, el parásito y sus antígenos
provocan la formación y estimulación sucesiva de
mintos mediante anticuerpos lgG y/o factores del
complemento y los destruyen. Los neutrófilos y ma­
las CPA, linfocitos TcoP, linfocitos TcoO y linfocitos crófagos, por ejemplo, han probado ser letales para
Figura 5-8. La respuesta inmune contra los helmintos. Las acciones mecánicas y bioquímicas de los helmintos sobre los Tco2. Las citocinas que se producen durante estas el Schistosoma en la ausencia de eosinófilos; los
e�do!eliocitos, macrófagos y fibroblastos promueve la producción de interferón(IFN) e interleucinas(IL) 1, 6 y 8. Estas faces provocan al comienzo una infiltración con neu­ eosinófilos, por el contrario, no afectan la sobrevida
_ trófilos, macrófagos, linfocitos B y mastocitos en de las larvas de Toxocara canis y la falta de anticuer­
�•�o�mas producen un_ Infiltrado inflamatorio inespecífico que mata muchos parásitos ( 1). Los parásitos que persisten
m1�1an una respuesta mmune que atrae más células inflamatorias, acumula complemento y estimula la producción de tomo al parásito. La predominancia de las células pos IgE o de mastocitos tiene un efecto mínimo so­
anhcue�os(2). La combinación de los epítopos parasitarios con los anticuerpos IgE correspondientes que recubren los Tco2 más tarde promueve un infiltrado rico en mas­ bre la habilidad de los ratones w/wv para desarrollar
ma�toc1tos provoca la degranulación de estas células (3). Los productos de los mastocitos generan un influjo de tocitos (mediante las ILs 3, 4 y 9) y eosinófilos (me­ resistencia contra He/igmosomoides polygynis. El
anllcue'!' ºs, complemento, ma�rófagos'. ;osinófilos y neutrófilos :n.tomo al parásito. La simple alteración fisicoquímica diante la IL-5). La IL-4, mientras tanto, estimula la concepto que está emergiendo ahora es que los ma­
. producción local de anticuerpos anafilácticos y clá­ crófagos, neutrófilos, anticuerpos IgG y el comple•
de los tejidos c_ausada p�r �slll_ mflamacmn Pf.�e� -�t?N!sª'. los paras,tos de los lúmenes(4). Asistidos por los anticuerpos
,¡ .
espec,ficos ,
Y factores del complemento, estas celulas se fiJan sobre los parásitos y producen radicales oxidantes;enzimas sicos, y la-!Ls6 se asegura que.los.anticuerpos circu­ mento son elementos importantes en la defe\lS,a con­
Y P'.oteínas t�xicas que matan al parásito(�). La inflamación es terminada por los eosinófilos que fagocitan los complejos lantes y el complemento continúan vertiéndose en el tra parásitos multicelulares. Respecto a los eosinófi­
ant1geno-anllcuerpos lgE y producen enzimas que neutralizan los productos de los mastocitos (6). área inflamada. los, sus capacidades defensivas parecen ser más bien
! ¡,
:i
JI
8'4 PARASITOlOGIA MEDICA INMUNOlOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 85

modestas y, en varios casos, son más elementos de 4. Las CPAs parecen jugar un rol a varios nive­
daño que de defensa para el hospedero. les. Estas células producen IL-1O, la cual inhibe la
secreción de IFN (el principal efector de las células
Selección de las respuestas Tcol o Tco2. El Tea!), e IL-12, la cual promueve la secreción de
hecho de que las respuestas protectoras contra al­ IFN, estimula la formación de células Tea1, pero
gunos parásitos pueden aumentarse mediante trata­ inhibe la producción de células Tco2. Cualquier fac­
miento con IFN o inhibirse por tratamiento con IL-4,. tor que favorezca la secreción de IL-10 sobre IL-12,
o viceversa, sugiere que la selección de la respuesta o viceversa, por lo tanto, podría dirigir la respuesta
correcta generará resistencia inmune mientras que la inmune en una u otra dirección. Por otra parte, las
elección de la respuesta incorrecta puede producir CPA que procesan antígenos inductores de alergias
parasitismo severo o crónico. En general, parecería (a lergenos) tienden a estimular la formación de lin­
que las respuestas Tco l son protectoras y las res­ focitos Tco2(que producen la IL-4 necesaria para la

().
puesta Tco2 perjudiciales para el hospedero infecta­ producción de IgE en humanos o sus equivalentes
do con parásitos intracelulares. Lo inverso parece en roedores) mientras que las CPA que procesan .'
ser cierto para los hospederos infectados con parási­ a ntígenos no alergizantes(como el toxaide tetánico) .j
tos grandes extra celulares. Las propias células Tco tienden a estimular la formación de Tea! (que pro­
no parecen tener un rol en la selección de la respues­ ducen el IFN necesario para la producción de IgG2
ta a propiada porque los RCT son similares en las
células Tcol y Tco2. Hasta ahora, se sabe que los
e IgG3 no alergizantes en ratones). Es casi inevitable
especular que la naturaleza del estimulo recibido por � CB
siguientes factores juegan un rol: las CP A tiene también un rol en la selección de las
l. Por lo menos en los ratones, parece haber un respuestas Tea I o Tea2. La ingestión de protozoos
factor genético del hospedero que influye en la se­ completos (parasitismo intracelular) comúnmente REFERENCIAS (VEASE TAMBIEN FIGURA 6):
lección de la respuesta. Algunas cepas de ratones resulta en una respuesta inmune mediada por célu- · CB = CELULA BLANCO
responden a un parásito predominantemente con
proliferación de células Tco I, mientras que otras
las, que es generada por los linfocitos Tea!, mien­ TCP = CELULA CITOTOXICA PRECURSORA
tras que la ingestión de antígenos solubles(parasitis­
cep¡¡s responden al mismo parásito con proliferación mo extracelular) corrientemente resulta en una res­ TCE = CELULA CITOTOXICA EFECTORA
de células Tco2. puesta de anticuerpos, que es generada por los linfo­
2 Como es de esperar, el estímulo antigénico citos Tco2.
parece jugar un rol crítico en la selección. En rato­ 5. Es tentador especular que los antígenos endó­ Figura 5-9. Activación de los linfocitos T citotóxicos. Las células infectadas por parásitos (P) a menudo generan
nes, los Schistosomas adultos inducen respuestas genos que se combinan con proteínas de la clase I (o epítopos parasitarios que se expresan en la superficie de la célula como complejos del epítopo (E) con proteínas de clase
Tea I mientras que la postura de huevos desencade­ la combinación misma de los antígenos con la pro­ 1 (PI). La combinación de estos complejos con el RCT complementario de los linfocitos T citotóxicos precursores (TCP),
na respuestas Tco2. Infecciones de ratones con T. teína de cl�se I) deben tener alguna influencia en la asistida por la coactivación de la interleucina 2 (IL-2), induce la multiplicación de los linfocitos TCP y su diferenciació11
spiralis inducen producción de ILs 9 y lO, basofilia selección de las respuesta Tco l. El resultado co­ hacia linfocitos T citotóxicos efectores (TCE). Cuando los linfocitos TCE reencuentran el mismo epítopo sobr_e una
intensa de la mucosa intestinal y expulsión rápida de rriente de la combinación de antígenos endógenos célula blanco (CB), secretan algunas citocinas que perforan la célula blanco y otras que destruyen las membranas de la
los gusanos. Las infecciones con H. polygyrus, por con proteínas de clase I es la producción de células célula y del parásito.
el contrario, inducen producción de ILs 3, 4, 9 y 10, T citotoxicas (TC). La proliferación y activación de
basofilia moderada, y son típicamente crónicas. Las estas células, a su vez, requiere la presencia de IL-
infecciones mixtas con T. spira/is y H. polygyrus 2 como un cofactor. Dado que después de la primera
inhiben la expulsión de T. spiralis, probablemente semana de la respuesta inmune, la IL-2 es secretada infectada y transportados al aparato de Golgi. Du­ cie, respectivamente), las proteínas de clase I pue­
porque la producción de !Ls 3 y 4 inhibe la expulsión sólo por las células Tea!, uno esperaría que la con­ rante este tiempo, los nE tienen amplia oportunidad den iniciar la activación del linfocito TC por si solas,
mediada por las !Ls 9 y 10. jugación de los endoantígenos con las proteínas II de encontrar y combinarse con PI que sean comple­ sin necesidad de un epítopo conjugado. Estas célu­
3. Hay alguna evidencia de que ciertos coestí- estuviera asociada a algún mecanismo que asegurara mentarias con su propia composición en aminoáci­ las (autólogas, alogénicas o xenogénicas), que po­
11111los (lipopolisacáridos, polinucleótidos) desenca­ que los linfocitos TC estimulados por este complejo dos. Los complejos nE-PI son finalmente transporta­ seen la propiedad de iniciar la activación de los
denan la producción de IFN, el cual favorece la di­ continuaran su desarrollo. Esto implica la presencia dos a la superficie de la célula hospedero. Como este linfocitos TC se llaman comúnmente •'l:étulas blan­
ferenciación hacia células Tea!. La inoculación de de células cap aces de proveer el cofactor IL-2. epítopo no existía en el organismo previamente y los co" porque son el blanco de las actividades de los
enzimas proteolíticas (como las producidas durante linfocitos T tienen la habilidad de reconocer millones linfocitos TC.
la migración de los helmintos), en cambio, parece Activación de los linfocitos T citotóxicos (TC). de epítopos diferentes, existe una muy alta probabi­ Como consecuencia de la combinación del com­
favorecer la diferenciación hace células Tco2. Los En muchos casos de células autólogas infectadas lidad que los RCT de algún linfocito TC sean com­ plejo nE-Pl con el RCT, los linfocitos TC que no ha­
coadyuvantes aparentemente pueden actuar t ambién por virus, bacterias o parásitos, el patógeno interfie­ plementarios con la composición del complejo nE-PI. bían sido estimulados por un antigeno anteriormente
como coestímulos en este sentido. La inyección de re con el metabolismo de la célula hospedero y la En este caso, el complejo nE-PI de la célula infectada (células TC precursoras o TCP) desarrollan recepto­
un antígeno con células de Mycobacterium o su ele­ dirige a que sintetice epítopos que no existían pre­ se combina con el RCT del linfocito TC y desenca­ res para la IL-2 en su superficie. Cuando estos recep­
mento activo, dipeptido muramil (DPM), genera res­ viamente en el organismo. La producción de neoepíto­ dena la activación del linfocito. Como en el caso de tores se combinan con la IL-2 proveniente de los
los linfocitos Tco, esta combinación requiere de la linfocitos Tco, los linfocitos TC proliferan y se dife­
puestas de inmunidad mediada ·por células (Tea l)
mientras que la inye1ic;'ioi1·de'un antígeno con lipopo­
pos endógenos también ocurre frecuentemente du­
rante la transformación tumoral. ):..�s neoepítopos . asistenci\l.de las proteínas CD3, cos+ y posiblemen­ rencian hacia células re
efectoras (TCE) que desa­
IisacáÍidos inicia réspúe:Stas de anticuerpos lgG e (nE), igual que las proteínas de clase I (PI), son te otras::Eñ·�¡ caso de células alogénicas e xenogé­ rrollan gránulos específicos(Figura 5-9). Las CPA y··
IgE(Tco2). sintetizados en el retículo endoplásmico de la célula nicas (de otro individuo coespecífico o de otra espe- las células Tco son, por lo tanto, necesarias para
86 PARASITOLOGJA MEDICA

proveer la IL-2 para la producción de linfocitos TCE, Otros mecanismos citotóxicos mediados por
T t. PROCESAMIENTO
JNMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS

2.COMPLEJO 3.ACTIVACION DE
87

pero no está claro de dónde proviene el estímulo células: DEL ANTIGENO CELULAS B+Tco CELULAS BY Tco
antigénico para la activación de estas células. Citotoxicidad mediada por células dependiente CELULA B CELULA Tco
de células asesinas naturales. Las células asesinas

-:�,
Mecanismo de lisis de las células blanco.Cuan­ naturales (CA) son linfocitos grandes y granulares
do el linfocito TCE encuentra una célula blanco con que no poseen los marcadores característicos de
el mismo complejo nE-Pl que estimuló su formación células T o B. Constituyen el 5% de los linfocitos
(y que, obviamente, es complementario con sus RCT), periféricos en el humano y son comúnmente identi­ CD40·�¡
ambas células se ligan a través de estas moléculas. A ficadas por la ausencia de CD3 (que incluye al RCT) ����
consecuencia de esta ligación, los gránulos de la y la presencia de CD16 y/o CD56 en sus membranas
célula TCE se desplazan hacia la zona de contacto externas. Estos dos últimos también se encuentran
de ambas células, abandonan el linfocito y liberan en unas pocas células T. Las CA no poseen RCT, no
proteínas perforadoras (perforinas), FNT y otras ci­ . tienen restricciones de clase I o II, y no expresan �
tocinas. Las perforinas penetran la membrana ex­ memoria inmunológica. Su actividad es incrementa­
terna de la célula blanco y forman poros o canales da y ampliada por tratamiento con IFN o IL-2. �
que permiten el ingreso de las citocinas (Figura 5-9). Las CA pueden destruir algunas células autólo­ PROLIFERACION
·
En pocos minutos, ambas células se separan, el lin­ gas defectuosas sin activación previa, por contacto y lii""'il
��DE CELULAS B
focito va en busca de otras víctimas y la célula lisis similares a las observadas con los linfocitos
blanco se disuelve dentro de un par de horas. Deben TCE. La naturaleza de los receptores de las CA o de �
existir también otros mecanismos alternativos por­ sus células blanco no es conocida todavía. Las CA
que algunos linfocitos TCE carecen de perforinas. parecen proveer protección inespecifica mientras se �-·· ..;:i�
. (1)
desarrollan las respuestas especificas por células TC. ��
El rol de los linfocitos TCE en las infecciones La actividad de las CA contra tumores e infecciones REFERENCIAS:
parasitarias.El rol de las células TCE en las infec­ virales ha sido bien documentada pero su efecto en AFIA= ANTIGENO DE FUNCION LINFOCITARIA, CD40L = LIGANDO DEL CD40,
ciones parasitarias ha sido estudiado mediante trans­ infecciones parasitarias no está aún bien definido. MAIC = MOLECULA DE ADHESJON INTERCELULAR, PI= PLASMOCITO
ferencia de poblaciones de linfocitos enriquecidas Existen informes de que las CA son activas contra T. (VEASE TAMBffiN FIGURA 5)
en células TCE, disminución del nivel de linfocitos cruzi, T. gondii y Babesia spp. en ratones, y su
TCE por administración de anticuerpos específicos actividad contra Plasmodium ha sido postulada. Figura 5-10. Activación de los linfocitos B. Los linfocitos B tienen la capacidad de procesar antígenos de manera similar
y de complemento o por el uso de cepas de ratones Citotoxicidad mediada por células dependien­ a los macrófagos y expresar complejos epitopo-proteina de clase II (E-Pll) en su superficie (1 ). La combinación de estos
(fl2m-/-) que carecen de linfocitos TC. Algunos ejem­ te de anticuerpos. En contraste con las células TCE complejos y otras moléculas superficiales del linfocito B con el RCT y otras moléculas correspondientes de los linfocitos
plos del rol de estas células son los siguientes: y CA que causan lisis de las células blanco sin la Tco ¡iermite la formación de un complejo linfocito B-linfocito Tco (2). La combinación de estas moléculas estimula al
- Los ratones fl2m-/- (que carecen de células ayuda de anticuerpos (citotoxicidad mediada por cé­ linfocito Tco a producir una proteína superficial (CD40L) que se combina con la proteina CD40 de la superficie del.·
TC) sufren infecciones agudas y mueren cuando son ·tulas independiente de anticuerpos), otras células linfocito B (3). Esta reacción activa al linfocito Tco para producir una serie de citocinas y al linfocito B para prodµcir
infectados con Trypanosoma cnizi, pero los ratones poseen una toxicidad potencial contra los parásitos los receptores correspondientes para esas citocinas. Las citocinas IL-2, 4 y 5, asistidas por l_a citocina IL-1 de los
fl2m+/+ (que poseen células TC) desarrollan infec­ (macrófagos/monocitos, neutrófilos, eosinófilos, macrófagos activados, induce la proliferación. de los linfocitos B. Otras citocinas inducen la diferenciación de los
ciones crónicas y sobreviven. Los primeros desarro­ etc.), pero necesitan de la ayuda de anticuerpos para linfocitos B hacia la formación de plasll)oci¡os que secretan diversos isotipos de anticuerpos (5).
llan abundantes focos parasitarios en los músculos entrar en contacto con las células blanco (citotoxici­
esqueléticos y cardíaco, pero no la infiltración celu­ dad mediada por células dependiente de anticuer­
lar que elimina a los parásitos. pos). de IgM en sus membranas externas. Sólo reciente­
- Las células TCE activadas con el antígeno P30 circulación, o a partir de un macrófago que ya lo ha
Todas estas células poseen en sus membranas mente se ha comprobado que la estimulación de los procesado previamente. El antígeno con la Ig son
de Toxop/asma gondii son capaces de lisar los ma­ externas receptores para la porción caudal (Fe) de linfocitos B es tan·compleja como la estirnulación de endocitados por el linfocito, el antígeno es digerido
crófagos infectados con T. gondii. las Igs. A través de estos receptores, las células efec­ los linfocitos T cooperadores. Probablemente la causa en sus epítopos constitutivos si es necesario, el epíto­
- La resistencia contra la malaria maligna de los toras se adhieren a las células blanco que están recu­
[· humanos ha'sido correlacionada con la presencia de biertas con sus anticuerpos específicos y descargan
de esta complejidad es la misma en ambos casos: po específico se combina con una proteína de clase
evitar que se produzcan reacciones inmunológicas II y el complejo E-PII migra ala supeñ1ciedel linfocito
linfocitos TC que reaccionan con el péptido LSA-1 substancias letales para el parásito (FNT, enzimas,
descontroladas que podrían amenazar la vida del B. El procesamiento del antígeno, por lo tanto, es
,: de Plasmodiumfalcipanim. Este péptido es expre­ proteínas básicas, radicales de oxígeno o de nitróge­ individuo. Los linfocitos B, aparte de diferenciarse comparable al que ocurre en los macrófagos. El próxi­
1' sado sólo durante la fase hepática de la infección. no, etc.). Se sabe que este tipo de citotoxicidad ocu­ hacia la producción de anticuerpos, actúan también
i mo paso es la formación de un complejo entre la
- La resistencia contra la leishmaniasis y la tei­ rre al menos en la defensa contra T. spira/is, H.
como células procesadoras de antígenos, particular­ célula B y un linfocito Tco. Para esto, el complejo E­
leriasis (de los bovinos) ha sido también correlacio­ polygynis, filarias, Schistosoma, T. cntzi y P/asmo­ mente cuando se encuentra en baja concentración en PII debe encontrar una célula Tco que posea un RCT
nada con la existencia de células TC activadas espe­ dium spp.
el organismo. La alta afinidad de las inmunoglobu­ con una composición de aminoácidos complementa­
cíficamente con·antígenos de los parásitos respecti­ linas que los recubren para sus antígenos respectivos ria a la suya propia. Las probabilidades de que esto
vos. El mecanismo exacto de destrucción de los Activación de los linfocitos B.Los linfocitos B
les sirven perfectamente para capturar de la circula­ ocurra no son tan remotas porque las células B y Tco
1 parásitos aún no se conoce con certeza pero se asu­ son los generadores de la inmunidad humoral o ción las molécul.as de antígeno. El linfocito B ad­
I' generalmente coexisten en los.mismos sitios: bazo,
me que los..mismos meca�is.mo� que destruyen la mediada por anticuerpos. Cuando estas células están
¡: membrana de la célula parasitadason activos contra diferenciadas suficientemente como para responder
quiere su anti�eh� �lpecifico (mediante combina­
ción con las Igs de su superficie) directamente de la
ganglios linfáticos, o infiltrados inflamatorios. La
unión entre las células B y Tco es iniciada por la
las membranas· del parásito. al estimulo antigénico, presentan unidades básicas
¡¡;i
,¡!
d
PARAS/TOLOGIA MEDICA INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 89

combinación del complejo E-PII con el RCT pero es máticas secretan anticuerpos IgM. La estimulación pos parasitarios puede activar el complemento por la 1969 para describir un fenómeno similar al anterior
reforzada y estabilizada por la combinación simultá­ subsecuente con las citocinas de las células Tco2 vía clásica. La acción de diversos factores del com­ que ellos observaron en squistosomosis. Describe la
nea de una serie de proteínas en cada célula. Las antes mencionadas provoca la exclusión del gen µ y plemento activado induce una inflamación local con existencia de resistencia inmune contra las reinfec­
mejor conocidas son el CD4 del linfocito Tco que se la activación secuencial de otros genes (y, o:, ó E) influjo de células con actívidad antiparasitaria, esti­ ciones, producida por estadios parasitarios que no
combina con moléculas de adhesión intercelular que inician la producción de Jgs G, A y E, respecti­ mula la fagocitosis y puede destruir membranas son susceptibles a la resistencia que ellos mismos
(MAIC) de la célula B, y al antígeno I de función vamente. Sin embargo, los genes que codifican para parasitarias. Este fenómeno ocurre,por ejemplo,con generan. En el caso de la esquistosomiasis, los
linfocítica (AFL-1) de la célula Tco que se combina la porciones de las lgs que se combinan con el Trypanosoma, Plasmodium y Leishmania cutáneas. esquistosomas adultos sobreviven y se reproducen
con la proteína de clase II del linfocito B (Figura 5-' epítopo no cambian, de modo que las diferentes 7. Los anticuerpos ligados a los epítopos del mientras que los nuevos esquistosomulas que pre­
1O). Las señales intracelulares generadas por la com­ clases de Igs aún mantienen su especificidad para el parásito pueden establecer una conexión entre éste tenden establecerse son destruidos. Aparentemen­
binación de estas moléculas activan al linfocito Tco epítopo original. y células efectoras (macrófagos, monocitos, neutró­ te, la reacción contra el esquistosomula es iniciada
para que produzca una nueva proteína de superficie: filos, eosinófilos, etc.), de manera que facilitan la por los antígenos de los esquistosomulas de una
el ligando para el CD40 (CD40L). Esta molécula se Efectos de los anticuerpos sobre los parásitos. acción de las células sobre el parásito. Este fenóme­ primera infección y mantenida por antígenos diferena
combina entonces con el CD40 que ya existía en la Los anticuerpos pueden afectar el curso de las infec­ no ocurre, por ejemplo, con Trypanosoma, Plasmo­ tes pero crosreactívos secretarios más tarde por los
superficie de la célula B, e inicia la activación de las ciones parasitarias de varias maneras. Los principa­ dium, Trichinella, Schistosoma y filarias. parásitos adultos. Aunque no ha sido estudiado
células Tco y B. La activación del linfocito Tco con­ les mecanismos efectores de los anticuerpos en pa­ 8. Los anticuerpos anafilácticos pueden desen­ específicamente, parece que las filarias del humano
siste fundamentalmente en la producción de una rasitología son los siguientes: cadenar la degranulación de mastocitos y basófilos. también exhiben inmunidad concomitante.
serie de citocinas que promueven la proliferación y I. En virtualmente todos los casos conocidos, Estos gránulos contienen sustancias que inducen La incógnita central en ambos casos es por qué
diferenciación de los linfocitos B. La activación del los parásitos intracelulares deben establecer contac­ inflamación,modifican drásticamente el microambien­ los parásitos existentes en el hospedero no son sus­
linfocito B consiste básicamente en la producción de to con la célula hospedero mediante receptores en la te del parásito y pueden dañar al parásito directa­ ceptibles a la inmunidad contra la reinfección. Una
receptores para las citocinas de la célula Tco. Las célula y en el parásito, antes de penetrarla. Los an­ mente. Este fenómeno ocurre, por ejemplo, con posibilidad es que los parásitos de la infección ori­
citocinas ILs 2,4 y 5, partícularmente con la asisten­ ticuerpos pueden establecer puentes entre los pará­ nematodos de los lúmenes gastrointestinal y respi­ ginal hayan desarrollado estrategias para evadir la
cia de la IL-1 de los macrófagos activados, son esen­ sitos y aglutinarlos, de modo que impiden su orien­ ratorio. inmunidad que no están disponibles para los pará­
ciales para iniciar y mantener la proliferación de los tación correcta para establecer el contacto entre los 9. Los anticuerpos pueden afectar la fisiología sitos que recién invaden al hospedero.
linfocitos B. Posteriormente, diversas citocinas ac­ receptores de la célula hospedero y del parásito. Este del parásito. La ablastina, por ejemplo, es una IgG
túan sobre los linfocitos B y los diferencian hacia la fenómeno ocurre, por ejemplo, con los esporozoites que inhibe la reproducción de los tripanosomas afri­
formación de plasmocitos que producen anticuerpos y merozoitos de los Apicomplexa. canos. Anticuerpos contra las glándulas esofágicas EVASIONDELARESPUESTAINMUNEPOR
lgM(1Ls2,4,5 y6),lgG(]FN e IL-6),IgE(IL-4) olgA
(IL-5).
2. La aglutinación también aglomera a los pará­
sitos impidiendo su libre difusión y dispersión por el
de nematodos hematófagos interfieren con las sus­
tancias anticoagulantes e impiden la alimentación de
LOS PARASITOS
¡
Como activadores de las células TcoP, los linfo­ organismo. De esta manera, los anticuerpos contri­ los gusanos. Los parásitos ya existian cuando el sistema inmu­
citos B son menos eficientes que los macrófagos buyen a mantener la infección localizada en el sitio ne empezó a desarrollarse con los primeros vertebra­
porque pocos linfocitos B producen IL-1. Como se de infiltración con células del hospedero. Este fenó­ Premunición e inmunidad concomitante. El tér­ dos,hace unos 400 millones de años. Como organis­
recordará, la IL-1 promueve la producción de IL-2 y meno ocurre, por ejemplo, con Trypa11osoma, Leish­ mino inmunidad relativa fue usado por primera vez mos con múltiples posibilidades biológicas que se.
de sus receptores que son indispensables para la mania y Toxoplasma. por Plehn en 1901 en relación a la malaria humana y enfrentaban a un sistema orgánico en desarrollo
multiplicación de los linfocitos Tco. Por el contra­ 3. Los anticuerpos dirigidos contra los recepto­ fue enmendado a premunición por Sergent y colabo­ filogénico, los parásitos tuvieron cada oporturiidad
rio, las células B parecen ser particularmente eficien­ res del parásito pueden ocupar básicamente el espa­ radores en 1924. Describe un tipo de resistencia de identificar las flaquezas del recién llegado e incor­
tes para activar linfocitos Tco0 o de memoria. Por cio destinado al receptor de la célula hospedera y inmune que sólo se mantiene mientras existe un re- porarlas a su propio ciclo de vida. Además, los pa­
otra parte, los linfocitos Tco2 son más eficientes bloquear la unión entre parásitos y células. El pará­ manente de la infección original en el hospedero. La rásitos que no pudieron eludir la acción de la inmu­
para promover la activación de las células B que los sito no puede, por lo tanto, entrar en la célula hos­ premunición es típica de la tuberculosis y un impor­ nidad probablemente se seleccionaron negatívamente
linfocitos Tco1. Esto puede deberse a que, contraria­ pedera. Este fenómeno ocurre, por ejemplo, con los tante mecanismo de defensa en malaria,toxoplasmo­ y desaparecieron sin dejar trazas. Estas son las razo­
mente a las células Tco1, los linfocitos Tco2 son esporozoites y merozoitos de los Apicomplexa. sis y tripanosomosis americana del humano, y en la nes teleogénicas por los cuales la mayoría de los
activos productores de IL-4 que es uno de los prin­ 4. Muchos parásitos penetran las células hospe­ babesiosis de los bovinos. El mecanismo de la parásitos actuales conviven bien con sus hospede­
cipales factores de la proliferación de las células B. deras mediante la producción de agujeros en sus premunición no se conoce completamente pero es­ ros, ocasionando infecciones crónicas que raramen­
!' Las células Tco2 son también las únicas que pro­ membranas con enzimas de penetración. Los anti­ tudios en modelos animales han demostrado que la te amenazan la vida del asociado. Los detalles que
mueven la producción de anticuerpos alergizantes a cuerpos producidos contra estas enzimas pueden depleción de las células CD4•(linfocitos Tco) o la permiten esta asociación poco conflictiva son larga­
través de la producción de IL-4. ocupar físicamente el espacio destinado al sustrato inhibición de la producción de IFNy causan una mente desconocidos, pero se conocen algunos ejem­
de manera que neutralizan la acción de la enzima. recrudescencia de la toxoplasmosis. Estos resulta­ plos de mecanismos mediante lo cuales los parásitos
Producción de anticuerpos. El producto final de Este fenómeno ocurre, por ejemplo, con los esporo­ dor sugieren que la premunición depende de la re­ eluden la respuesta inmune del huésped.
la diferenciación de los linfocitos B, las células plas­ zoitos y merozoites de los Apicomplexa y con las. estimulación constante con antígenos del parásito
máticas, no expresan lgs en su superficie pero tiene larvas migrantes de helmintos que deben abrirse que mantiene la producción de linfocitos Tco (pro­ Descarte de antígenos altamente reactivos. En el
abundante retículo endoplásmico y secretan Igs en camino con enzimas en el espesor de tejidos sólidos. bablemente Tcol ) e IFN. El fenómeno puede ser más curso de la evolución, algunos parásitos parecen
gran cantidad(hasta 2.000 moléculas por segundo). 5. Los anticuerpos dirigidos contra las toxinas complejo,sin embargo,porque el síndrome de inmu­ haber descartado antígenos que eran reconocidos
Estos anticuerpos son específicos para combinarse parasitarias pueden igualmente impedir la combina­ nodeficiencia adquirida(SIDA) de los humanos,que por el hospedero en favor de antígenos que no son
con el epítopo que estimuló su producción. Antes de ción de la toxina con su sustrato de modo que neu­ depleta las células CD4+, causa exacerbación de la capaces de combinarse con las proteínas de clase I
experimentar actívación, las células B poseen sólo tralizan la actividad.. de la toxina. Este fenómeno toxoplasmosis pero no de la malaria. o II deHiospedero. Se sabe, por ejempló, c¡Ue!/.scarf:s'
IgM en su superficie (producto de un gen µ). Ante ocurre,por ejemplo,con los tripanosomas africanos. Inmunidad concomitante es un término de la suum, Trichuris muris y Trichinel/a spiralis, en ra­
la estimulación antigénica original, las células plas- 6. La combinación de anticuerpos con los epíto- inmunidad tumoral que Smithers y Terry usaron en tones, Nippostrongyl11S brasi/iensis en ratas y P/as-
90 PARAS!TOLOGIA MEDICA INMUNOLOG/A DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 91

modium en ratones y humanos, persisten por más la inmunidad. To,wplasma, por ejemplo, ingresa a los IL-2 e IFN mientras que los ratones que sufren una dose en quistes rodeados de tejido fibroso del hos­
tiempo en hospederos que poseen ciertos halotipos macrófagos activamente y Leishmania lo hace utili­ leishmaniasis progresiva inducen una respuesta con pedero (quistes de T. spiralis o Sarcocystis y larvas
en·su complejo principal de histocompatibilidad. Se zando receptores para el complemento. Como estas producción abundante de IL-4 pero escasa en IL-2 de cestodos).
sabe también que la resistencia de ratones a la enfer­ estrategias evitan la fagocitosis normal del macrófa­ e IFN. Muchos nematodos digestivos que son ex­
medad de Chagas está relacionada con los alelos H­ go, que es la que desencadena la producción de pulsados rápidamente del intestino estimulan la pro­
zq y H-2d, que codifican para proteínas de clase II radicales oxidantes, los parásitos no se ven someti­ ducción de IL-4 y una infiltración con basófilos. H. INMUNODIAGNOSTICO
· que se conjugan con epítopos protectores y con 1� dos a la acción de estas sustancias, Los toxoplasmas polygyrus, por el contrario; que típicamente causa
constitución genética B 1 O o DBA, que inducen alta vivos también permanecen en su propia vacuola una infección crónica, estimula la producción de lis La infección parasitaria induce anticuerpos que
producción de IgM. Los T. cnlZi que infectan a (fagosoma) que no se fusiona con los lisosomas de 9 y IO y produce poca infiltración basofilica. Nor­ matan al parásito, que dañan al huésped, o que son
ratones que carecen de los alelos H-2q y H-2d, o de manera que el parásito está protegido contra las malmente, los anticuerpos IgE facilitan la adheren­ irrelevantes par<! la sobrevida de cualquiera de ellos.
los genes caracteristicos de las cepas BIO o DBA, enzimas lisosomales. Babesia bovis y Theileria par­ cia de los eosinófilos al Schistosoma y la lisis sub­ Estos últimos anticuerpos son los más numerosos y
son menos afectados por la inmunidad y tienen más va de los bovinos, y los tripomastigotes de T. cntzi secuente del parásito. Estudios en poblaciones de a menudo se utilizan para el diagnóstico inmunobio­
oportunidad de sobrevivir y ser transmitidos. escapan del fagosoma hacia el citoplasma antes de pacientes jóvenes (y, presumiblemente, con infec­ lógico de la infección. Las técnicas de diagnóstico
que éste se fusione con los lisosomas de manera que ciones recientes) han mostrado la producción pre­ inmunobiológico se explicarán en el capítulo res­
Depresión de la inmunidad del hospedero. Cier­ también evitan la actividad de las enzimas lisosoma­ ferencial de anticuerpos IgG4 que inhiben la pro­ pectivo. Aquí sólo discutiremos algunas precaucio­
tos parásitos como Plasmodium, Trypanosoma, les. Las leishmanias permanecen dentro del fagoso­ ducción de IgE y bloquean su fijación sobre el pa­ nes que deben observarse en su uso.
Leishmania, Trichinella, Schistosoma, garrapatas, ma después de su fusión con los lisosomas pero rásito. Las características más apreciadas de una reac­
etc., pueden deprimir la habilidad del huésped para poseen mecanismos para neutralizar las proteasas ción inmunodiagnóstica son su especificidad y su
montaruna respuesta inmune. En el caso del T. cntzi, lisosomales y tolerar el pH ácido de este comparti­ Variación antigénica. Algunos parásitos exhi­ sensibilidad. La especificidad es, en esencia, la ha­
una proteína soluble secretada por el parásito inhibe mento, Finalmente, todos los parásitos intracelulares ben variabilidad antigénica. Los tripanosomas afri­ bilidad de distinguir los anticuerpos contra un pará­
la producción de IL-2 en ratones o la expi;esión de están más allá del alcance de los anticuerpos ya que canos del humano y de los animales domésticos, por sito de los anticuerpos contra todos los demás pa­
receptores para la IL-2 en humanos. Dado que la IL- éstos no pueden penetrar las células. ejemplo, están cubiertos por una proteína altamente rásitos y depende fundamentalmente del antígeno
2 y su combinación con los receptores respectivos antigénica que cambia periódicamente en el curso de que se utilice. Es importante entender que, aunque
es esencial para la proliferación de las célulasTco al Producción de antígenos fugaces. Algunos pa­ la infección. Para el tiempo que se producen anti­ cada anticuerpo reacciona sólo con un epítopo, el
comienzo de la respuesta inmune, esta secreción rásitos se defienden de la inmunidad mediante la cuerpos contra el primer antígeno, la proteína cam­ suero de un individuo infectado contiene una colec­
efectivamente suprime la respuesta contra el parási­ producción de antígenos fugaces. Plasmodium, · bió y los nuevos parásitos ya no son susceptibles a ción de millones de anticuerpos dirigidos contra cien­
to.· En el caso de las Leishmania, los macrófagos Leishmania, Schistosoma, Toxocara, Trichinella, ellos. Cuando se producen anticuerpos contra este tos o miles de epítopos del parásito en cuestión. El
infectados con L. majar (el agente de la leishmania­ Strongyloides y las filarias, por ejemplo, están cu­ segundo antígeno, la proteína cambió nuevamente. antígeno de diagnóstico es sólo una sonda que debe
sis cutánea) exhiben moléculas de clase II y produ­ biertos por moléculas antigénicas que se regeneran De esta manera, la producción de anticuerpos espe­ seleccionar, de entre esa inmensa población, los an­
cen abundante IL-1 (ambas necesarias para estimular cada pocas horas. Los anticuerpos y las células cíficos se mantiene siempre un paso por detrás del ticuerpos que son exclusivos para el parásito que se
los linfocitos B yT) pero la infección con L. donovani efectoras que se combinan con estos antígenos son antígeno que recubre al parásito en un momento dado. quiere identificar. Esto indica cuán importante es la
(agente de la leishmaniosis visceral) inhibe ambos eliminadas de la superficie del parásito junto con las Aunque con menos regularidad que en los tripanoso­ selección•del antígeno adecuado para evitar las re­
fenómenos. moléculas antigénicas antes de que tengan la opor­ mas africanos, la variabilidad antigénica ha sido acciones cruzadas. Las antiguas preparaciones. anti­
tunidad de producir daño irreparable. observada en Plasmodirmz, Babesia, Giardia y En­ génicas eran poco más que extractos crudos del
Neutralización de los efectores de la inmunidad. tamoeba. parásito que contenían decenas o cientos de proteí­
Algunos parásitos neutralizan las moléculas efecto­ Producción de antígenos solubles. Ciertos pará­ ;,. nas diferentes, cada una de ellas llevando varios
ras de la inmunidad. Los macrófagos comúnmente sitos producen antígenos solubles. Cantidades gran­ Seclusión física. Finalmente, algunos parásitos epítopos. Como muchas especies parasitarias po­
matan los parásitos intracelulares mediante la pro­ des de antígenos solubles que se liberan en la circu­ se protegen de la respuesta inmune simplemente seen los mismos elementos estructurales o bioquími­
ducción de radicales oxidantes, de enzimas proteo­ lación pueden bI_oquear los anticuerpos o células mediante seclusión física. Los parásitos de células cos, es natural que ellas también posean proteínas
líticas y manteniendo un pH bajo en el compartimen­ efectoras circulantes antes de que éstas tengan la libres como Plasmodium, Babesia, Theileria, etc., en común. Los anticuerpos formados contra estas
to lisosomal. Leishmania, sin embargo, posee enzi­ oportunidad de alcanzar al parásito. Estos antígenos están protegidos de los anticuerpos que no pueden proteínas comunes serán incapaces de distinguir
mas que detoxifican los radicales oxidantes (dismu­ pueden también saturar los receptores de las células penetrar las células del hospedero. No obstante, entre los parásitos respectivos. Aparte de esto, los
tasa superóxido, catalasas y peroxidasas), secreta T y B para el antígeno respectivo e inducir tolerancia cuando la infección provoca la fonnación de neoan­ epítopos de las glicoproteínas a menudo contienen
enzimas que degradan las proteasas lisosomales, y inmune. Es posible también que los antígenos induz­ tígenos en la célula parasitaria y se producen anti­ carbohidratos en su composición. Como los carbo­
está bien adaptada a los pH ácidos del compartimen­ can la activación policlonal de las células B inhibien­ cuerpos contra estos antígenos, los anticuerpos se hidratos son menos variados que las proteínas, es
to lisosomal. Una correlación positiva ha sido en- . do la producción de Ig específica por un fenómeno pueden adherir a la superficie de la célula y favore­ corriente que proteínas diferentes de parásitos dis­
contrada también entre la presencia de enzimas de retroalimentación. Finalmente, un exceso de cer su fagocitosis. Este fenómeno a menudo contri­ tintos compartan un mismo carbohidrato. De nuevo,
detoxicantes de los radicales de oxígeno y la sobre­ antígeno puede causar la formación de moléculas buye a la producción de anemia en las parasitosis de el anticuerpo dirigido contra el epítopo que contiene
vida de T. spiralis y H. polygyrus. Los estadios inmunosupresivas (prostaglandinas, citocinas inhi­ los eritrocitos. Los parásitos intracelulares de los este carbohidrato va a reaccionar, el menos parcial­
larvales de Taenia taeniaeformis y de Echinococcus bitorias). tejidos sólidos, como las formas quísticas de T. mente, con todas las proteínas que contengan el
spp. secretan sustancias anticomplementarias que gondii, T. cruzi, Sarcocystis, T. spiralis, etc., están mismo carbohidrato. La presencia de estas proteínas
activan el complemento antes de que éste constituya Desviación de la inmunidad protectora. Ciertos también protegidos de la fagocitosis, lo cual puede o carbohidratos comunes es lo que conspiraba con­
un peligro para la sobrevida del parásito. parásitos tienen la habilidad de desviar la respuesta explicar su sobrevida prolongada. Finalmente, algu­ tra la especificidad de las reacciones serológicas en
inmune hacia una modalidad que no los afecta. Los nos parásitos se protegen de la respuesta inmune el pasado'. un· antígeno de diagnóstico, por lo tanto,
Evasión de los efectores de la inmunidad. Algu­ r�tones resistentes a la Ieishmaniasis inducen una alojándose en órganos que están más allá del alcance debe contener sólo epítopos que sean exclusivos del
nos parásitos eluden la actividad de los efectores de respuesta linfocitaria con abundante producción de de la inmunidad (cerebro, ojo, feto), o establecién- parásito que se quiere identificar. Entre los años 1960
INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 93
92 PARASITOLOGIA MEO/CA

otros. Los métodos inmunológicos pueden facilitar INMUNOPATOLOGIA


y 1980 se efectuaron una serie de experimentos de puesta efectiva contra algunos antígenos parasita­
la identificación del portador crónico.
purificación empírica de extractos parasitarios para rios. Sujetos malnutridos, con infecciones intercu­
rrentes, o embarazadas pueden sufrir estados de Corno ya se ha dicho, las reacciones inmunoló­
seleccionar antígenos de diagnóstico adecuados. Mejoría de la eficiencia de los métodos directos.
Aunque la tecnología de la época permitió sólo un depresión de la inmunidad que se expresen en una gicas son respuestas automáticas que, ocasional­
En algunos casos los métodos directos son poco mente, pueden causar daño al hospedero. Estas re­
éxito parcial, muchas de esas preparaciones están respuesta inmune disminuida contra el parásito. Se
eficientes (examen de excretas para estrongiloidosis acciones deletéreas para el hospedero han sido clá­
aún en uso. Solamente a partir de los años 1980, con sabe que cepas distintas de parásitos de la misma
o amibiasis crónicas, biopsia para triquinosis o toxo­ sicamente llamadas hipersensibilidades o alergias.
la técnica de la transferencia eléctrica de proteínas • especie pueden variar en su composición antigénica
carosis, examen de sangre para malaria o enfermedad En varios casos, el daño producido por la infección
(western blotting), se pudo empezar a identificar los y, por lo tanto, generar respuestas inmunes diferen­
de Chagas crónicas), o peligrosos (examen de con­ parasitaria es debido a reacciones de hipersensibili­
antígenos exclusivos de cada parásito. La técnica de tes. Finalmente, infecciones con un gran número de
tenido intestinal para equinococosis canina), o re­ dad inducidas por el parásito. En clínica estas reac­
inhibición de las reacciones serológicas con frag­ parásitos pueden provocar depresión de la iniriuni­
quieren considerable experiencia (examen de sangre ciones son corrientemente clasificadas en cuatro
mentos de antígenos y los avances en el secuencia­ dad del hospedero o generar un alto nivel de antíge­
para especies de Plasmodium, Babesia, o Theileria). categorías (Figura 5-11 ).
miento de polipéptidos están permitiendo identificar nos en la circulación que se combinan con los anti­
Las pruebas inmunológicas pueden ayudar en estos
ahora la composición en aminoácidos de los epito­ cuerpos respectivos e impiden su reacción in vitro.
casos. La hipersensibilidad de tipo I (o inmediata, o
pos relevantes. Se prevé que en el futuro cercano el Estas consideraciones raramente son críticas en la
actualidad porque las preparaciones antigénicas diag­ r�agínica). Es mediada por anticuerpos IgE que se
diagnóstico serológico de las parasitosis se efectua­ Campañas epidemiológicas. Las campañas epi­
rá con epítopos (o combinaciones de epítopos) sin­ nósticas en uso contienen un gran número de antíge­ fiJan por su extremo distal (porción Fe) sobre la su­
demiológicas requieren el examen de muestras de perficie de los mastocitos o basófilos. La aglomera­
téticos de exquisita especificidad. nos y revelan numerosas poblaciones de anticuer­
muchos individuos para establecer la proporción de ción de estos anticuerpos cuando se combinan con
La sensibilidad de una reacción serológica con­ pos. Podrían ser muy importantes en el futuro cerca­
infectados. En ocasiones en que el examen directo es sus antígenos específicos desencadena la degranu­
siste en la habilidad de visualizar reacciones entre un no, sin embargo, cuando se utilicen preparaciones
ineficiente y requiere de personal experto (malaria, lación de las células. Los gránulos contienen subs­
número (relativamente) escaso de moléculas. Esta que contengan un solo o unos pocos epítopos que
amibiasis), la tarea puede resultar impracticable por tancias que dilatan la red capilar (causando rubor y
característica depende fundamentalmente de la prue­ identificaran solamente una población bien determi­
métodos directos pero convertirse en una operación edema), contraen la musculatura lisa y provocan una
ba que se utilice. La prueba más sensible de uso nada de anticuerpos. El consenso de los especialistas
sencilla por métodos inmunológicos. Por ejemplo, un infiltración con neutrófilos, macrófagos y eosinófi­
corriente en la actualidad es la prueba de amplifica­ es que, en los casos en que se puede elegir, es más
técnico bien entrenado puede examinar sólo unas 50 los. Esta hipersensibilidad es la responsable de las
ción enzimática (Enzyme-Linked ImmzmoSorbent seguro el diagnóstico directo por observación de
muestras microscópicas de malaria en una jornada de manifestaciones clínicas de muchas infecciones con
Assay) o ELISA. En el ELISA clásico, a la reacción estadios del parásito que el diagnóstico inmunológi­
trabajo, pero en la misma jornada podría analizar un larvas migratorias (incluyendo la dermatitis de la
entre unas pocas moléculas de antígeno y anticuerpo co.
par de miles de ELISAs. esquistosomosis, la neumonía de la ascariasis y la
se le agrega un segundo anticuerpo coajugado con
Aplicación del diagnóstico inmunológico eosinofilia pulmonar de las filaríosis), de otras mani­
una enzima, que reacciona con el anticuerpo del Verificación de carga parasitaria. En algunas festaciones sistémicas de las filariosis, de algunos
paciente. Si se agrega entonces el substrato de la infecciones en que el númer9 de parásitos es impor­
El diagnóstico inmunológico en infecciones pa­ síntomas de la triquinosis, posiblemente por los sín­
enzima (diseñado para que cambie de color cuando tante para el pronóstico o tratamiento (triquinosis en
se degrada), la extensiva conversión del substrato rasitarias se reserva para los siguiente casos: tomas digestivos de algunas nernatodosis intestina­
humanos, dirofilariosis en perros) se puede dosar el les, de algunas de las manifestaciones de las infes­
que se obtiene con unas pocas moléculas de enzima
nivel de antígenos parasitarios en la circulación en taciones por ectoparásitos y de los síntomas de la
amplifica notablemente y hace visible la reacción Detección de parásitos inaccesibles por la vía
vez de los anticuerpos. Este método se aplicó en picadura de abejas.
original. directa. Los parásitos localizados en el sistema ner­
triquinosis humana hace unas décadas pero se aban­
Aunque la sensibilidad es una cualidad muy apre­ vioso (cisticercos), músculos (Trichinella), hígado
donó porque los resultados con las técnicas de la La lúpersensibilidad de tipo 11 (o citotóxica). Es
ciada de las reacciones serológicas, tiene ciertos (hidatide), ojo (Toxocara) u otros tejidos a menudo
época eran inconsistentes. En la actualidad se está mediada por anticuerpos IgG (u, ocasionalmente,
inconvenientes en parasitología. Por una parte, una son inaccesibles a los métodos directos, pero pue­
usando con éxito en dirofilariasis canina. IgM) que se fijan mediante su lugar de combinación
prueba muy sensible puede revelar reacciones cru­ den ser revelados por exámenes inmunológicos.
zadas leves que no eran observables con técnicas
V' con el antígeno sobre la superficie de las células
Detección de infecciones prepatentes. En al­ Verificación de resistencia. Si se conoce el an­ que serán dañadas. Esto implica que las células
menos sensibles. Este fenómeno conspira contra la
tígeno responsable por la resistencia contra una poseen los antígenos respectivos en su superficie.
especificidad de la prueba. Por otra parte, una prue­ gunos casos el parásito causa manifestaciones de
infección parasitaria, la verificación de la respuesta La presencia de los anticuerpos en la superficie de
ba muy sensible es positiva aun con los bajos niveles enfermedad antes de llegar al estado adulto y elimi­
correspondiente indicará la proporción de indivi­ las células activa el complemento que lisa sus mem­
de anticuerpos que encuentran en infecciones anti­ nar huevos en las excreciones del paciente (fasciolo­
duos que son resistentes dentro de una población branas u opsoniza las células que son fagocitadas
guas (triquinosis, toxoplasmosis, enfermedad de sis hepática, neumonia por ascarides, otras larvas
determinada. Desgraciadamente, los antígenos res­ subsecuentemente. Esta hipersensibilidad es par­
Chagas, hidatidosis) y el clínico a menudo no puede migrantes, ostertagiasis de los bovinos, etc.). Las
ponsables por la resistencia no se conocen para la cialmente responsable por la anemia de la malaria,
discriminar de inmediato si está enfrentando una pruebas inmunológicas también son útiles para iden­
mayoría de las infecciones, de manera que esta téc­ babesiosis y leishmaniosis, por la neumonía de la
infección nueva o el remanente de una infección tificar el parásito en estos casos.
nica tiene sólo una aplicación limitada en la actuali­ esquistosornosis, y posiblemente por la miocarditis
antigua. dad. Un caso en que se puede aplicar es las infeccio­
Finalmente, es importante considerar que existe Detección de infecciones crónicas. En muchas de la enfermedad de Chagas. En el caso de la malaria
nes por nematodos respiratorios (dictiocaulosis) de y babesiosis, la infección de los eritrocitos hace
una serie de factores que influyen en la producción infecciones crónicas los parásitos son demasiado
los rumiantes. Como se sabe que esta infección deja que estas células expresen neoantígenos en su su­
de una respuesta inmune. La genética y estado fisio­ escasos como para ser encontrados fácilmente por
una fuerte inmunidad, la sola verificación de una perficie. En el caso de las leishmaniasis y esquis­
lógico del hospedero, y la cepa y carga de parásitos métodos directos (malaria, enfermedad de Chagas,
infección pasada (por la presencia de inmunidad tosomosis, los glóbulos rojos o las células pulmo­
son ejemplos obvios. Recientemente .se ha demos­ t9xoplasmosis, estrongiloidosis). El diagnóstico de
la·infección puede ser importante, sin embargo, ya especifica) es suficiente para.asumir que.. los anima,
- -· . nares adsorben antígenos de los parásitos respec­
trado en humanos y roedores infectados con Plás-· les positivos son 'resistentes:"
modium que algunos hospederos carecen de las pro­ sea porque puede causar patología importante o tivos de la circulación. En el caso de la enfermedád
teínas de clase II adecuadas para generar una res- porque el paciente es la fuente de infección para de Chagas, parece que anticuerpos que reaccionan
!NMUNOLOG!A DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 95
94 PARASITOLOG!A MEDICA
1,:
,,1
1
TIPOI TIPOII células asesinas naturales, linfocitos citotóxicos y
neutrófilos. Esta hipersensibilidad es la responsa­
crónica tiene un origen autoinmune. Por ejemplo, en
numerosos pacientes humanos y en animales de labo­
ble por la patología hepática en la esquistosomosis, ratorio infectados con T. cnlZi se han encontrado
los granulomas producidos por las larvas migrato­ anticuerpos contra tejido cardíaco, sarcolema y célu­
rias, las inflamaciones de la leishmaniosis, algunas las de los ganglios nerviosos. Estudios de ir\munidad
lesiones por ectoparásitos, y probablemente parte mediada por células también han demostrad� que los
de las lesiones cardíacas de la enfermedad de linfocitos de pacientes humanos o de animales infec­
Chagas. tados a menudo reaccionan contra tejido cardíaco o
Como ejemplos de inmunopatología en infeccio­ nervioso. La transferencia de linfocitos cooperadores
nes parasitarias, discutiremos con un poco más de o citotóxicos de ratones con infecciones crónicas a

.....
detalle los fenómenos relevantes que se producen ratones normales ha causado desmielinización del
durante las infecciones con un protozoo (Trypano­ nervio ciático e inflamación del hígado en los animales
soma cn1z1), un trematodo (Schistosoma mansoni), receptores. Por último, es bien sabido que T. cruzi
y un nematodo (Wuchereria bancrojlz). causa una respuesta policlonal inespecífica de los
linfocitos B que puede facilitar las respuestas humo­
lnmunopatología en enfermedadde Chagas rales contra antígenos del hospedero. A pesar de
todas estas demostraciones, aún no ha sido posible

TIPO W La enfermedad de Chagas se desarrolla en tres


etapas. Una etapa aguda, comúnmente asintomática,
reproducir la patología típica de la enfermedad de
Chagas crónica en animales de laboratorio, ni se ha
en la cual los parásitos abundan en la sangre y en encontrado una relación directa entre la patología y
diversos tejidos, particularmente músculo. Una etapa los niveles de autoanticuerpos en pacientes huma­
indeterminada que es asintomática y cursa con esca­ nos. Es posible, no obstante, que estas fallas se deban
sos parásitos en la circulación o en los tejidos, pero a que aún no existe un buen modelo de laboratorio
presenta serología positiva. Una fase crónica que, en para la enfermedad de Chagas crónica, y a que en el
una proporción desconocida de los hospederos (pero paciente humano la patología es un episodio remoto

@(@�m a menudo estimada hasta en un 30%), desarrolla pa­


tología cardíaca o digestiva. La patología de la infec­
que no guarda relación con las respuestas inmunes
prevalentes al momento del examen. Pocos especialis­

@�@Ml
ción aguda se caracteriza por la invasión de los tejidos tas dudan el origen autoinmune de la enferniedad de
por los parásitos con producción de focos inflama­ Chagas crónica, pero aún existe considerable contro­

(®@&)
torios locales. La inflamación y la reducción subse­ versia acerca de los mecanismos que operan.
IENil cuente del número de parásitos son seguramente fe­
nómenos ÍnmllJlOlógicos, puesto que animales de la­
boratorios o plcientes humanos inmunosuprimidos Inmunopatología en esquistosomosis 111a11s011i
generalmente muestran escasa inflamación de los te­
Figura 5-11. Las hipersensibilidades. Las reacciones inmunes que dañan al hospedero comúnmente se denominan jidos invadidos pero tienen parasitemias enormes. Numerosas investigaciones en las últimas déca­
hipersensibilidades. En la clínica, las más conocidas son las hipersensibilidad_es de tipo 1, II, III y IV. Aunque no hay evidencia de fenómenos inmuno­ das han mostrado claramente que la patología de las
patológicos en la fase aguda, es posible que esta esquistosomiasis es debida en un alto grado a las
etapa inicie las reacciones inmunológicas que causa­ reacciones inmunológicas del hospedero y que el
cruzadamente con el parásito y con el miocardio Esta hipersensibilidad es la responsable por la pato­ rán patología años más tarde. La patología de la en­ parásito tiene poca participación directa en ella. La
permiten el ataque de las células cardíacas por los logía renal en la malaria y esquistosomiasis huma­ fermedad cardíaca crónica consiste en el adelgaza­ infección comienza con la penetración de la cercaría
eosinófilos. nas, en las tripanosomosis humanas y animales, y en miento de la pared del órgano, a menudo con a través de la piel y su diferenciación hacia un es­
la dirofilariosis canina, de la patología cerebral en la aneurismas apicales, dilatación de las cámaras, fibrosis quistosomula. Pronto después de una infección pri­
La hipersensibilidad de tipo 111 (o por com­ malaria humana, de las manifestaciones sistémicas intersticial, inflamación y fibrosis del sistema de con­ maria intensa, el paciente desarrolla prurito y enro­
plejos inmunes). Es mediada por un exceso de an­ de la babesiosis bovina y de algunos síntomas de las ducción y disminución del número de células en los jecimiento pasajero de la piel, signos que han sido
ticuerpos lgG y de sus antígenos respectivos en la cestodosis larvarias y, posiblemente, de la triquino­ ganglios nerviosos. La patología digestiva consiste correlacionados con la producción de IgE (hipersen­
:i circulaciones. Los anticuerpos se combimm con sus sis. En todos estos casos, la infección temprana pro­ en la dilatación e hipertrofia del esófago o colon, con sibilidad de tipo 1) y de inmunidad mediada por

i '· anticuerpos respectivos en la circulación ·a una ve­ vee los antígenos que estimulan la formación de an­ inflamación y fibrosis de los tejidos y disminución de células (hlpersensibilidad de tipo IV). Durante la
locidad mayor de lo que el organismo los puede ticuerpos, y la persistencia de los parásitos provee las células de los ganglios nerviosos. Es improbable segunda semana de una reinfección, cuando los
1: ¡ eliminar de manera que los complejos antígeno­ los antígenos que formarán los complejos precipi­ que estos cambios sean causados directamente por la parásitos están migrando a través de los pulmones,
1i·
,,.',
1

anticuerpo precipitan en el espesor de los tejidos. tantes. actividad del tripanosoma porque raramente se en­ numerosos pacientes desarrollan manifestaciones
i Estos complejos activan el complemento el cual cuentran parásitos en asociación con estas lesiones respiratorias transitorias con acumulación de infil­
¡ puede dañar los tejidos mediante dos mecanismos.. Hipersensibilidad de tipo IV (o tardía). Es y porque las lesiones o las manifestaciones clínicas de trados de eosinófilos en los pulmones. Estas mani­
El complejo C5-9 destruye membranas celúlares en una reacción de inmunidad mediada por células que la fase crónica aumentan en pacientes inmuno­ festaciones han sido correlacionados con la produc­
11
las vecindades, y la formación de factores C5a, C3a daña los tejidos d_el hospedero. Fundamentalmente, suprirnidos que, sin embargo, desarrollan parasitemias ción de IgE. Los pacientes que han sufrido infeccio­
'¡ .\, y C4a atrae, activa y degranula mastocitos·y neutfó­ esta reacción es iniciada por las citocinas de los recrudecentes. Por el contrario, hay abuñcianies suge­ nes con gran número de parásitos a menudo desa­
:1 filos lo cual produce una severa inflamación local. linfocitos Tco2 que atraen y activan macrófagos, rencias de que las lesiones de la enfermedad de Chagas rrollan durante la cuarta a sexta semana un síndrome
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PARASITOLOGIA MEO/CA JNMUNOLOG/A DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 97


agudo con fiebre, escalofríos, artralgia, urticaria, lin­ sólida de que ellos sean los responsables por esta microfilarémicos asintomáticos. Estas característi­ ca de nuestro planeta. Entre los parásitos del huma­
foadenopatía, vascularitis difusa, dolor abdominal, inflamación. Una pequeña proporción de los habi­ cas apoyan la opinión de que las microfilarias supri­ no, ya existen cepas de Plas111odi11111 falciparum
diarrea sanguinolenta y eosinofilia marcada (fiebre tantes de zonas endémicas no muestra ninguna men l"s reacciones inmunes que generan patología; resistentes a la cloroquina, cepas de Tric/1omo11as
de Katayama). Estas manifestaciones coinciden con evidencia de infección actual o pasada, pero fre­ en este caso la ausencia de microfilarias coincide vagina/is resistentes al metronidazol, y cepas de
el comienzo de la ovoposición y están correlaciona­ cuentemente muestra reactividad inmunológica (de con respuestas inmunológicas poderosas y con una Giardia duodena/is resistentes al metronidazol y a
das con la producción y depósito en los tejidos de anticuerpos o inmunidad mediada por células) con­ patología importante. De no mediar tratamiento, en la furazolidona. Vectores de tanta importancia para
complejos antígeno-anticuerpo (hipersensibilidad de tra los parásitos. Estos parecen ser casos de resis­ una pequeña proporción de los pacientes la inflama­ enfermedades humanas como los mosquitos y la
tipo III). La lesión más persistente y dañina de' la tencia absoluta contra la infección, posiblemente ción local genera la producción de tejido fibroso mosca doméstica han desarrollado resistencia a
esquistosomiasis es la producción de granulomas generada por infecciones con filarias de animales. que, a través de los años, ocluye los vasos linfáticos muchos insecticidas. La situación es mucho peor en
alrededor de los huevos de los parásitos atrapados Las manifestaciones iniciales de la filariosis cróni­ y conduce a elefantiasis (filariosis obstructiva). Las medicina veterinaria. Valga como ejemplo el hecho
en los tejidos. Esta es una reacción de hipersensibi­ cas en áreas de endemia so·n comúnmente fiebre y caracteristicas de las lesiones en las filariasis infla­ de que, en 1987, ya se había reportado resistencia
lidad de tipo IV a los antígenos de los huevos que se linfangitis localizadas (como en los visitantes a las matoria y obstructiva, y el hecho de que los linfoci­ contra antihelmínticos en los nematodes gastroin­
desarrolla lentamente y en proporción al número de zonas de endemia) que se resuelven en unas pocas tos T de estos pacientes muestran mayor reactividad testinales más importantes de los rumiantes y de los
huevos presente en los tejidos. En infecciones inten­ semanas. La mayoria de estos pacientes (y la mayo­ contra antígenos del parásito que cualquier otro pa­ equinos, y contra insecticidas o acaricidas en 170
sas con S. mansoni o S.japonicum, frecuentemente ria de. los pobladores de áreas endémicas que no ciente, sugieren que la patología correspondiente especies de artrópodos de importancia veterinaria.
hay producción de fibrosis periportal que causa obs­ recuerdan haber sufrido manifestaciones clínicas) depende de una hipersensibilidad de tipo IV. Final­ La situación actual es tal que la producción de va­
trucción del flujo sanguíneo. Algunos de estos pa­ desarrollan subsecuentemente una microfilaremia mente, el tratamiento de pacientes microfilarémicos cunas antiparasitarias no sólo parece posible, sino
cientes desarrollan también un síndrome nefrótico asintomática que puede durar por varios años (fila­ con el microfilaricida dietilcarbamazina ocasional­ que se está convirtiendo en una urgente necesidad.
que ha sido atribuido al depósito de complejos antí­ riosis asintomática). Estos individuos a menudo tie­ mente causa un síndrome con fiebre, artralgia, lin­
geno-anticuerpo en el riñón. nen una reactividad inmunológica (humoral o me­ foadenopatía, cefalea y postración. Aunque no hay Las vacunas antiparasitarias actuales
diada por células) deprimida contra los antígenos pruebas sólidas todavía, se sospecha que estas mani­
lnmunopatología en filariosis linfática del parásito, pero una reactividad normal contra festaciones son causadas por la liberación de antíge­ Por consideraciones prácticas y éticas, las úni­
otros antígenos. La coincidencia de microfilaremia . nos de las microfilarias destruidas y la formación de cas vacunas que se han desarrollado hasta este
En el continente americano la filariosis linfática con inmunidad deprimida y falta de patología, a complejos de antígeno-anticuerpo que generan una momento en parasitología son de importancia vete­
del humano es producida por Wuchereria bancrofti. menudo por muchos años, sugiere que la presencia hipersensibilidad de tipo III. rinaria. Durante el desarrollo histórico de la inmuno­
Las larvas infectantes son transmitidas por mosqui­ de las microfilarias causa una inmunodepresión profilaxia se utilizaron primero organismos muertos
tos. En seis o más meses, éstas se desarrollan en específica que protege contra el desarrollo de pato­ INMUNOPROFILAXIS (o sus extractos), luego organismos vivos, atenua­
finos gusanos adultos que viven por varios años en logía. Por el contrario, algunos de los individuos dos o modificados, y últimamente subunidades (an­
los vasos linfáticos, particularmente del área genital infectados desarrollan un síndrome asmático noc­ Por más de un siglo, desde la vacuna antirrábica tígenos) de los organismos. En la actualidad, se está
y de las extremidades inferiores. Las hembras son turno que dura por varias semanas y puede recurrir de Pasteur en 1885, las vacunas han constituido un trabajando hacia la identificación y utilización de los
vivíparas y producen larvas (llamadas microfilarias) (eosinofilia pulmonar tropical, o EPT). Estos pa­ medio simple, efectivo y &rato para controlar las epítopos protectores. Con la excepción de las vacu­
que viven en la linfa y en la sangre. Los mecanismos cientes no desarrollan microfilaremia periférica pero enfermedades infecciosas. Su uso en enfermedades nas contra las larvas de Taenia avis y contra la
fisiopatológicos de las filariosis no son completa­ muestran muy altos niveles de anticuerpos lgG con­ parasitarias, sin embargo, ha sido largamente impe­ garrapata de los vacunos Boophilus microplus que
mente comprendidos todavía, pero hay abundante tra las microfilarias, de anticuerpos lgE específicos dido por el desconocimiento de los mecanismos de contienen antígenos recombinantes del parásito,
evidencia de que la patología de las filariosis es y totales, y de eosinófilos. Ultimamente s_e ha de­ defensa, y de los antígenos responsables por las re­ todas las demás vacunas antiparasitarias existentes
mayormente debida a las reacciones inmunológicas mostrado satisfactoriamente que ésta es una reac­ acciones protectoras en parasitología. Como ya fue consisten esencialmente en la administración de pa­
del hospedero más que a las actividades directas de ción de hipersensibilidad de tipo l. Hay evidencia explicado, la inmunología de las infecciones parasi­ rásitos vivos o atenuados que producen infecciones
los parásitos. Para entender la inmunopatología de sólida de que la EPT es causada por el atrapamiento tarias era demasiado compleja como para estudiarla limitadas. Aunque estas vacunas no son del interés
la filariosis linfática, es necesario considerar el am­ y destrucción de las microfilarias en el tejido pul­ con los recursos técnicos y conceptuales que exis­ inmediato del especialista en salud humana, las dis­
plio espectro de manifestaciones que se pueden en­ monar, posiblemente por un fenómeno de citotoxi­ tían hasta hace sólo una década. Además, hasta cutiremos brevemente porque ilustran los únicos
contrar en los pacientes. Visitantes que adquieren cidad dependiente de anticuerpos. En oposición al hace poco no existían los medios para producir los enfoques de inmunoprofilaxia contra parásitos que
la infección durante cortas estadías en zonas de paciente microfilarémico pero asintomático, el pa­ antígenos protectores de los parásitos en una escala eran posibles hasta hace unos pocos años, y repre­
endemia generalmente desarrollan manifestaciones ciente de EPT parece exhibir una hiperreactividad comercial. Esta situación ha cambiado en los últimos sentan la tecnología que aún se está utilizando.
de linfangitis sin microfilaremia u obstrucción de contra los antígenos de las microfilarias que genera años. Los avances recientes en inmunología y en l . La primera técnica de inmunoprofilaxia uti­
los vasos linfáticos. La enfermedad se resuelve es­ la patología característica. Finalmente, algunos in­ biología molecular están proveyendo de los medios lizada en gran escala contra parásitos fue probable­
pontáneamente después de algunos meses. Proba­ dividuos infectados en áreas endémicas desarrollan para identificar los mecanismos y antígenos protec­ mente la premunización contra Babesia spp. de los
blemente, estas manifestaciones deberían ser consi­ episodios recurrentes de linfangitis, particularmen­ tores en enfermedades parasitarias, la biotecnología bovinos que fue introducida en 1897 en Australia y
deradas como la respuesta "normal" a los parásitos: te de las piernas y los genitales (filariosis inflama­ permite ahora producir proteínas (antígenos) in vitro en 1899 en los Estados Unidos. La babesiosis es una
la inmunidad del hospedero suprime la microfilare­ toria). Estas manifestaciones están comúnmente re­ en gran escala, y la identificación de los oligopépti­ infección parecida a la malaria pero transmitida por
mia y, con tiempo, mata a los parásitos adultos, lacionadas con la muerte de los parásitos adultos en dos (epítopos) protectores permitirá pronto su sín­ garrapatas. Los animales que sobreviven una prime­
pero el paciente sufre inflamaciones locales pasaje­ los vasos linfáticos y la producción de inflamacio­ tesis comercial por procedimientos convencionales. ra infección comúnmente persisten como portadores
ras durante el curso de la infección. Se ha especu­ nes agudas y más tarde granulomatosas en tomo a Por otra parte, recién se está creando conciencia de sanos de un pequeño número de parásitos y desa­
lado que la linfangitis puede ser provocada por el los parásitos. Estos pacientes no exhiben microfila­ que el uso indiscriminado de drogas antiparasitarias rrollan resistencia a los síntomas de infecciones se­
depósito de comp_lejos a_ntígeno-anticuerpo,en'los. remia pero desarrollan eosinofilia y sus respuestas (particularm�_nte en_ medicina veterinaria) promueve cundarias (premunición). La premunización consiste
vasos linfáticos pero, aunque estos complejos han inmunes específicas (lgG, lgE, inmunidad mediada la producción de resistencia de los parásitos c·ontra simplemente en infectar los animales susceptibles
sido demostrados frecuentemente, no hay evidencia por células) son más robustas que en los individuos estas drogas y contribuye a la contaminación quími- con sangre de portadores, vigilarlos cuidadosamen-
.. 98 PARAS!TOLOGIA MEDICA INMUNOLOGIA DE LAS INFECCIONES PARASITARIAS 99

te y tratarlos con una dosis subcurntiva tan pronto 4. Como la premunización contra Babesia es parásitos lo cual puede ser dificil de mantener con, y son susceptibles a los elementos efectores de la
como evidencian signos de la enfennedad. Esto les complicada, cara, y a menudo de resultados impre­ organismos que no se reproducen in vitro. A menos inmunidad. Las formas asexuales y sexuales en los
permite desarrollar premunición contra las reinfec­ decibles, en 1964 investigadores australianos intro­ que la vacuna se pueda conservar en nitrógeno líqui­ eritrocitos también son susceptibles al ataque inmu­
ciones, pero evita el daño que produce la primera dujeron una vacuna con parásitos modificados que, do (lo cual es caro, y complicado su almacenamiento ne debido a que las células parasitarias expresan
exposición al parásito. La premunización aún se con mejoras, aún está en uso. El inóculo consiste en y transporte), la estandarización es un problema serio neoantigenos en su superficie y pueden ser removi­
usa en partes de América Latina y del Medio Oeste eritrocitos infectados con Babesia que se inoculan y porque la mortalidad normal de los parásitos va redu­ das mediante fagocitosis o lisis. Ultimamente se ha
asiático. se recuperan de bovinos esplenectomizados cada 3 · ciendo su eficacia día a día. Por otra parte, estas demostrado que los merontes (esquizontes) en los
2. Una técnica conceptualmente similar fue in­ ó 4 días. Este pasaje rápido por bovinos sin bazo vacunas representan un delicado equilibrio entre hepatocitos también son afectados por la inmuni­
troducida en 1958 para vacunar pollos contra las selecciona de manera desconocida a los parásitos de inmunogenicidad y patogenia que puede quebrarse dad.
coccidias. Como en la coccidiosis humana, una pri­ manera que, luego de unos 30 ó 40 pasajes, han en cualquier momento. Además, los parásitos exhi­ Las investigaciones sobre la inmunoprofilaxis de
mera infección de coccidiosis aviar produce cierto perdido gran parte de su patogenicidad para los ben diversidad genética (diferencias genéticas entre la malaria son muy numerosas pero dos enfoques
grado de resistencia que se hace más y más fuerte bovinos normales, pero conservan su inmunogeni­ las cepas) y variación biológica(cambios fenotípicos han tenido particular éxito. Por un lado, el grupo de
con las infecciones sucesivas. En este caso, pollos de cidad. Inoculación de estos parásitos en bovinos durante la infección) que hacen la estandarización de Ruth y Richard Nussenzweig, en la Universidad de
unos pocos días se infectan con una mezcla cuidado­ normales generalmente produce considerable resis­ la vacuna precaria. Por otra parte, las vacunas vivas Nueva York, se ha concentrado en el estudio de los
samente regulada de ooquistes en el agua de bebida. tencia a las infecciones de campo con ausencia casi derivadas de parásitos obtenidos de las deposicio­ antígenos protectores naturales de los esporozoitos.
Regulación de la humedad de las camas de las incu­ total de enfermedad. La selección de parásitos pro­ nes y administradas parenteralmente (como la vacu­ Ellos identificaron una proteina circumsporozoidal
badoras permite una contaminación moderada del tectores pero apatogénicos mediante pasaje por hos­ na contra A. caninum) pueden ser dificiles de esteri­ en la superficie de los esporozoitos, la reprodujeron
ambiente que asegura infecciones subsecuentes tam­ pederos naturales esplenectomizados o huésped anor­ lizar. Finalmente, la administración de parásitos vivos como una proteína recombinante y la utilizaron para
bién moderadas. Los pollos son tratados, mientras males ha sido intentada en varios casos pero con a un hospedero susceptible crea problemas prácticos vacunar animales de laboratorio y humanos. Este
tanto, con vitaminas K y A para controlar las hemo- éxito limitado. Las bases o los mecanismos de selec- en medicina veterinaria (porque los pocos parásitos antigeno es altamente efectivo para producir protec­
rragias intestinales y favorecer la regeneración del ción no se conocen. vecinales que se desarrollan hasta adultos mantienen ción contra la infección natural pero su eficacia de­
epitelio destruido por los parásitos. Como en el caso 5. Investigadores de Nueva Zelandia reciente- la contaminación del ambiente) y éticos en medicina pende de la concentración de anticuerpos específi­
anterior, las infecciones moderadas bajo las condi- mente obtuvieron por múltiples pasajes en ratón una humana (porque constituye la producción vdi'iintaria cos en la circulación: si el número de anticuerpos no
ciones descritas permiten el desarrollo de resistencia cepa de T. gondii que no forma bradizoitos ni produ- de una infección). Por todas estas razones, la tenden­ es suficiente, algunos esporozoitos logran filtrarse a
sin causar la patología típica de la infección natural.ce ooquistes en gatos. Administrada a ovinos, pro- cia actual es hacia la administración de antígenos o través de la barrera protectora, se multiplican en las
Esta vacuna aún está en uso. duce sólo leve fiebre pasajera pero induce la forma- epítopos protectores purificados. células hepáticas, y los merozoitos resultantes ya no
3. En 1959 se introdujo una vacuna contra la ción normal de anticuerpos. El parásito desaparece son susceptibles a los anticuerpos contra la proteína
dictiocaulosis bovina que aún está en uso en Europa. espontáneamente en 4 a 6 semanas. Como en la mujer, circumsporozoidal. Hasta este momento, ha sido dificil
Dictyocau/11s spp. son parásitos de las vías aéreas T. gondii en las ovejas pasa al feto sólo durante la Estado actual de las vacunas producir y mantener el tenor de anticuerpos necesa­
pulmonares de los rumiantes que pueden causar una fase aguda de una infección primaria. Si las ovejas contra parásitos humanos rio para producir resistencia efectiva y duradera. Por
intensa traqueobronquitis en una primera infección, son infectadas con esta cepa un par de meses antes otro lado, el grupo de Manuel Patarroyo, en el Hos­
pero dejan una fuerte resistencia contra las reinfec- de la época de fecundación, para el tiempo del desa- Virtualmente todas las parasitosis comunes de pital San Juan de Dios de Bogotá, se ha dedicado a
ciones. La vacuna consiste en la administración oral, rrollo ·fetal ya han eliminado al parásito y tienen importancia veterinaria y varias parasitosis de am­ identificar los epítopos superficiales de los merozoito:f
separadas por un mes, de dos dosis de 1.000 larvas suficiente inmunidad como para evitar la infección plia distribución en poblaciones humanas(malaria, y a sintetizar polipéptidos que simulan estos
infectantes irradiadas. La irradiación se calcula paracongénita en caso de reinfecciones. Una vacuna enfermedad de Chagas, esquistosomosis, filariosis) epítopos. Vacunación de poblaciones humanas con
dañar a los gusanos lo suficiente como para que no contra el aborto de las ovejas por Toxop/asma (que son objetivos naturales para la producción de va­ combinaciones de estos epítopos sintéticos
sobrevivan más que una o dos semanas en el hospe- es importante en Nueva Zelandia) basada en esta cunas. No es de extrañar, entonces, que en la actua­ consistentemente ha producido fuerte protección
dero de manera que no llegan a adultos ni causan cepa(ToxoVac) se empezó a comercializar enNueva lidad se esté trabajando en la prevención inmuno­ contra la infección natural pero sólo en alrededor de
gran patología. Durante este tiempo, sin embargo, Zelandia en 1988 y en Inglaterra en 1992. lógica de virtualmente cada parásito común del hu­ una cuarta parte de los individuos vacunados. La
alcanzan a producir antígenos protectores que indu- 6. Un consorcio de gobierno, una universidad y mano o de sus animales domésticos. Aquí discuti­ inmunidad protectora en este caso también depende
cen resistencia en los temeros vacunados. Recien- unafirrna particular enNuevaZelandia comunicaron remos brevemente el estado actual de las investiga­ de la concentración de anticuerpos específicos en la
temente se ha producido alguna evidencia de que la en 1989 la producción de un antígeno recombinante ciones sobre la inmunoprofilaxia de algunas circulación y también ha sido dificil producir y man­
irradiación también podria interferir con la síntesis de T. ovis que protege al 94% de los ovinos vacuna- parasitosis del humano. tener una respuesta humoral efectiva. Aunque se
de los antígenos y hacerlos más inmunogénicos. dos contra el desarrollo del cisticerco respectivo. esperarla que el uso simultáneo de ambos procedi­
Una vacuna similar contra el ancilostoma más Esta es quizás la primera vacuna producida con la Malaria. Se estima que ocurren casi 500 millones mientos tuviera un efecto aditivo, no parece haber
común de los perros (Ancylostoma caninum) se in- tecnología moderna. de casos nuevos de malaria en el mundo cada año (15 habido intentos de usar ambas vacunas en una mis­
trodujo en los Estados Unidos en 1973 pero, a pesar 7. Un consorcio del gobierno, una firma particu- millones de ellos sólo en América Latina) y que 2,5 ma población. Estas investigaciones han contado
de ser efectiva, no tuvo éxito comercial. El desarro- lar y una universidaél en Australia recientemente millones de gente, particularmente niños, mueren por posiblemente con las- mejores concentraciones de
llo de vacunas irradiadas se ha intentado contra nu- identificó y produjo por recombinación una proteína la infección cada año. Por su número y el hecho de talentos, fondos y tecnologías que se han logrado
merosos otros parásitos, incluyendo algunos de im- del intestino de la garrapata de los vacunos Brophi/us que la infección frecuentemente ocurre en niños y en reunir en inmunología parasitaria. No obstante, aún
portancia para el hospedero humano como Plasmo- microplus que se empezó a vender como vacuna en áreas desprovistas de recursos médicos adecuados, no han podido producir una vacuna de uso práctico
dium, Leishmania, Trypanosoma, Toxoplasma, On- 1995. la vacunación contra la malaria es una antigua ambi­ después de 28 y 24 años, respectivamente, de trabajo
chocerca, Ascaris, Toxocara, Trichinella, Schis- El uso de parásitos vivos en una vacuna presenta ción de los especialistas en salud humana. intenso. Esto demuestra cuán formidable es el reto
tosoma y Fasciola. Aunque algunos resultados-han ••:'i una serie de inconvenientes porque dificulta su pro- Los puntos más obvios de ataque inmuno_l9gico para conseguir una vacuna contra parásitos.
sido interesantes, en ningún caso se han obtenido ducción, estandarización, almacenaje y transporte. contra Plasmodium son los esporozoitos y los mero­
posibilidades comerciales. La producción de la vacuna requiere una fuente de zoitos. Ambos se encuentran libres en la circulación Enfermedad de Chagas. Se estima que 16 a 18
¡,
L1:

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millones de personas están infectadas con T. cruzi zos para identificar antígenos protectores. En una noprofilaxis de las infecciones parasitarias en la Boothroyd JC, Komuniecki R. (eds.). Molecular App­
en Latinoamérica y que 80 a 90 millones viven en revisión de 21 intentos de inmunizar animales de actualidad puede describirse como un optimismo roaches to Parasitology. New York: Wiley-Liss, 1995.
zonas de endemia y están en riesgo permanente de laboratorio con preparaciones antagónicas purifica­ cauteloso. Aunque la tecnología moderna provee Ellis RW (ed.). Vaccines: New Approaches to Immu­
infección. Numerosos intentos de vacunación se han das, sin embargo, la protección obtenida alcanzó ahora de muchos recursos que eran insospechados nological Problems. Bastan: Butterworth-Heinemann
efectuado en animales de laboratorio usando pará­ sólo a 32-56% en promedio. Una de las mayores hace sólo una década, se están descubriendo tam­ 1992.
sitos muertos o sus extractos, parásitos irradiados o dificultades para atacar los esquistosomas inmuno­ bién una serie de peculiaridades de la asociación Kuby, J. Immunology. New York: Freeman, 1994.
avirulentos, o antígenos superficiales. En la mayo­ lógicamente es el hecho de que estos parásitos están parásito-hospedero que dificultan su control. La Pearson TW. (ed.). Parasite Antigens: toward new strate­
ría de los casos se ha obtenido una reducción de la constantemente renovando sus proteínas superficia­ naturaleza le está recordando permanentemente al gies for vaccines. New York: Dekker, 1986.
parasitemia de la fase aguda pero no se ha prev�ni­ les que son altamente inmunogénicas. Esto significa parasitólogo que esta asociación ha tenido el bene­ Siga! LH, Ron Y. Immunology and Inflammation. New
do la infección totalmente. El hecho de que la mo­ que cualquier elemento efector de la inmunidad (an­ ficio de muchos millones de años de evolución para York: McGraw-Hill, 1994.
culación de parásitos muertos produzca reacciones ticuerpo o célula) que se fije en la superficie del desarrollarse y perfeccionarse. En esta escala, el Soulsby EJL (ed.). Immune Responses in Parasitic
inmunes, pero no resistencia a la infección sugiere parásito será prontamente eliminado al desprenderse humano es un recién llegado. Si bien tiene la capa­ Infections: Immunology, Immunopathologhy and
que los antígenos protectores son secretados por del esquistosoma el antígeno respectivo. Los antíge­ cidad de arrancarle a la naturaleza sus secretos, la Immunoprophylaxis. Boca Raton, Florida: CRC Press,
parásitos vivos. La implantación en los tejidos de nos que no están ubicados en la superficie del pará­ labor no será fácil ni los resultados inmediatos. 1987, 4 volumes.
cámaras microporo con parásitos vivos también sito probablemente no son accesibles al sistema in­
Spring DR, Koff WC. Tapies in Vaccine Adjuvant Re­
produce respuestas inmunológicas pero no resisten­ mune mientras el parásito está vivo. Una alternativa
search. Boca Raton, Florida: CRC Press, 1991.
cia, lo cual indica que el parásito vivo es necesario que se está investigando actualmente es la reducción BIBLIOGRAFIA Wakelin, D. Immunity to Parasites. London: Edward
pero no suficiente para la producción de protección. de la patología hepática, aún en presencia de parási­
Tres condiciones dificultan particularmente el estu­ tos vivos. Los granulomas hepáticos de la esquisto­
Arnold, 1984.
Ash C, Gallagher RB (eds.). Immunoparasitology. Núme­ Wang CC. (ed.) Molecular and Immunological Aspects of
dio de la inmunoprofilaxis de la enfermedad de somosis son una respuesta de hipersensibilidad de ro combinado de Immunol Today y Parasitol Today,
tipo IV a antígenos del huevo que ya están bien
parasitism. Washington: American Association forthe
Chagas. En primer lugar, no existen modelos de March 1992.
definidos. Es posible que estos antígenos se puedan
Advancement of Science, 1991.
laboratorio adecuados para la fase crónica de la Barriga OO. The Immunology of Parasitic Infections.
utilizar para regular la respuesta inmune del hospe­
Warren KS. (ed.). Immu·nology and molecular Biology of
enfermedad de Chagas que es el mayor problema Baltimore: University Park Press, 1981.
médico en el humano. En segundo lugar, el parási­ dero de manera que produzcan una reacción inocua
Parasitic Infections. 3rd. ed. Oxford: Blackwell, 1993.
Baniga OO. Veterinary Parasitology for Practitioners. Wyler DJ. (ed.). Modero Parasite Biology: cellular,
to por sí mismo deprime la respuesta inmune por en vez de la hipersensibilidad. Minessota: Burgers International, 1997.
supresión de la producción de la IL-2 y de sus re-
immunological, and molecular aspects. New York:
Behnke JM (ed.). Parasites, Immunity and Pathology: the Freeman, 1990.
. ceptores, y la desvía mediante un estímulo inespe­ Filariosis. Las estimaciones actuales ponen el consequences of parasitic infection in mammals. New
cífico de los linfocitos B y T. En tercer lugar, el número de personas infectadas con filarias en el
Yang WK. (ed.) Animal Parasite Control Utilizing Bio­
York: Taylor and Franes, 1990. technology. Boca Raton,. Florida: CRC Press, 1992.
desconocimiento de la fisiopatología inmunológica mundo en alrededor de 11O millones, muchas de
de las lesionés crónicas fuerza a ser extremadamen­ ellas en áreas carentes de servicios médicos adecua­
te cauto con cualquier procedimiento de inmuniza­ dos. Las filariosis, sin embargo, presentan obstácu­
ción. Es improbable que se efectúen avances impor­ los particulares para el desarrollo de un control in­
tantes en inmunoprofilaxia antes de que se conozca munológico. En primer lugar, no existen modelos de
con certeza la génesis de las lesiones crónicas. Una laboratorio que repliquen fielmente la enfermedad
solución alternativa que no parece haberse intenta­ del humano excepto el chimpancé. El costo de ad­
do aún es la producción de inmunidad contra la quisición y de mantenimiento de chimpancés y la
picadura del insecto vector. Hay abundantes prue­ típica cronicidad de la enfermedad hacen prohibiti­
bas de que la inmunización contra artrópodos he­ vo el uso de este modelo. En segundo lugar, no hay
matófagos interfiere con la alimentación del artró­ evidencias sólidas de que el humano desarrolle re­
podo y, en unos pocos casos, se ha demostrado que sistencia a las infecciones con filarias. En tercer lu­
esta interferencia impide la transmisión de organis­ gar, la patología de las filariosis depende en una
mos patógenos. gran medida de respuesta inmunes del hospedero
que aún no están bien identificadas. Esto significa
Esquistosomosis. Estimaciones acerca de la pre­ que, como en el caso de la enfermedad de Chagas,
valencia de las esquitosomosis humanas fluctúan de la inducción indiscriminada de inmunidad puede
125 a 200 millones de personas, con unos 2 millo­ dañar al paciente en vez de protegerlo. Por último,
nes mostrando manifestaciones clínicas de la infec­ la distribución de las filariosis en zonas remotas a
ción. Los intentos de vacunación con extractos cru­ los recursos médicos no facilita el estudio de las
dos de parásitos han fracasado consistentemente infección. Por estas razones, el estudio de la inmu­
pero la inoculación de cercarías o esquistosomulas noprofilaxia de las filariosis humanas está clara­
irradiados ha producido protección satisfactoria en mente en sus comienzos. Diversos antígenos reco0
bovinos y en primates no humanos. Como el uso de nocidos por el suero de pacientes humanos han sido
una vacuna viva en humanos es improbable, particu­ identificados y algunos han sido replicados como
larmente en las áreas de alta endemia de esquistoso-:· ·proteínas recombinantes, pero su relación con reac­ ... ·: .-·-
mas que comúnmente carecen de facilidades médi­ ciones protectoras aún no se conoce.
cas adecuadas, se han efectuado numerosos esfuer- La posición de los especialistas hacia la inmu-
Capítulo 6 EPIDEMIOLOGIA Y CONTROL DE ltlS PARASITOSIS 103

EPIDEMIOLOGIA Y CONTROL social) varían en el tiempo en forma asimétrica con


distinta velocidad, por lo cual la situación d;·una

DE LAS PARASITOSIS
determinada parasitosis en un paciente o en una
sociedad, representaría sólo un momento histórico
del nivel dinámico que ha alcanzado el equilibrio
MARISA TORRES y PATRICIA MUÑOZ entre los tres ejes en cada lugar concreto. Esto lleva
a destacar la responsabilidad de los equipos y auto­
ridades de salud sobre el futuro de las parasitosis en
el mundo, pues en el eje social interviene directa­
mente las acciones en salud.
Las parasitosis como interesantes problemas dueto de migraciones o viajes, aparecen infecciones
Se debe estar atento a las variaciones, es decir, a
y desafíos epidemiológicos que habían sido erradicadas o nunca se habían pre­
la dinámica de los fenómenos tradicionales, para
sentado. Estas variaciones en la distribución geográ­
reaccionar con dinamismo y oportunidad; por ejem­
A pesar de los importantes avances tecnológi­ fica de las parasitosis genera nuevos desafios para el
plo, la presencia de enteroparasitosis en grandes po­
cos, educativos, la tendencia a mejorar la calidad de diagnóstico y la terapia de los equipos de salud.
blaciones periurbanas con condiciones de pobreza o
vida de las poblaciones, la urbanización y la migra­
la aparición de agentes oportunistas en hospederos
ción hacia centros de mayor atractivo económico y Aportes de la epidemiología a la parasitología
inmunocomprometidos, para reaccionar con dina­
cultural, las parasitosis tradicionales continúan es­
¡�
mismo y oportunidad. En el estudio de las enferme­
tando presentes en el mundo en una alta prevalen­ Tradicionalmente la epidemiología ha aportado
¡i dades parasitarias el ámbito relacionado a la "triada

l,i
1
cia. Entre las parasitosis de amplia distribución y su "método de estudio" a las distintas disciplinas.
ecológica" es el que tradicionalmente se ha estudia­
gran magnitud que constituyen problemas de salud Los estudios epidemiológicos en el ámbito parasita­
Figura 6-2. Componentes del nivel de vida. do. Este ámbito comprende al parásito, al hospedero

1
pública, s.e pueden mencionar a la amibiasis, mala­ rio penniten conocer y abordar adecuadamente los
y al ambiente (Tabla 6-1 ).
ria, tripanosomosis, esquistosomosis, leishmaniosis, fenómenos relacionados con salud y enfermedad.
El modelo planteado es muy atingente al fenóme­
¡,' pediculosis y sama. Han sido los estudios descriptivos, los que valoran
11,¡ · A estas parasitosis tradicionales se han agregado la magnitud de los fenómenos y sus variaciones en el
se debe abordar considerando que la monocausalidad
ha sido sustituida por la multicausalidad y multi­
no de las para'sitosis, sobre todo en lo relacionado al
dinamismo entre infección y enfermedad, lo que se

lfJ'i¡:.
los parásitos oportunistas en hospederos inmuno­ tiempo, espacio y personas, y los estudios analíticos
factorialidad de los condicionantes de la salud y sus ejemplifica muy bien en la enfennedad de Chagas,
comprometidos, tales como neumocistosis, criptos­ los que han contribuido a orientar la causalidad de

¡:¡¡.
variaciones. Es así como la parasitología se ve donde un porcentaje de los infectados desarrolla
poridiosis, microsporidiosis. Existe también el fenó­ las patologías parasitarias (Figura 6-1 ).
influenciada profundamente en el nivel de vida de patología con expresiones clínicas que difieren en
meno de las enfennedades emergentes donde, pro- Actualmente el análisis de un problema mórbido
los pueblos. Dicho concepto se entiende como el los distintos regiones, fenómeno que pareciera estar

i]I,
estudio de los componentes del nivel de vida en el relacionado con características genéticas de las po­
:¡:¡ que participan nueve elementos que intervienen en blaciones, con las variaciones del agente biológico,
lil PROBLEMAS Identificación de frecuencia y variaciones:·
forma diversa. Estos componentes son: salud, edu­ con el sistema de atención de salud y con la concep­
DE SALUD cación, recreación, vestuario, alimentación, vivien­ ción de enfermedad de la población. .·

r
:.¡ !',:.¡ 1
Tiempo / Geografia / Personas
,,,\ da, libertades humanas, trabajo y seguridad social.
Los elementos que participan ban sido esquema­
Estudios de sobrevida y

\1¡1;,1:.1:
adherencia a tratamientos tizados en un triángulo equilátero, que incluye otros
nueve triángulos, también equiláteros, sostenidos
1 Estudio de: sobre una base que expresa el desarrollo. La idea al
· lii Cohortes generar este concepto es poder contar con un indica­
i;!¡¡li! Casos y control dor que permita objetivar, es decir, medir y evaluar
' .i\
·I!:
Ensnyosctinicos
controlados
Prevalencia
Experimentos
el nivel de vida de una comunidad para poder com­
pararlo con otros y consigo mismo en el tiempo, con
el objeto de mejorarlo (Figura 6-2).
Riesgos: Otro aspecto de relevancia frente a los fenómenos
Relativo parasitarios es la conceptualización sobre salud y
Atribuible enfermedad. Es relevante comentar el modelo plan­
Amilisisdetests teado por un autor francés, Peccei, quien propone un
nuevo paradigma basado en la idea de que existe una
capacidad biológica similar para todos los seres
PLANtFICAClON DEL humanos, sustentada en una capacidad genética po­
CONTROL OE tencial para generar salud, la que se ve influida por
PROBLEMAS DE SALUD
factores ecológicos y sociales. Este autor integra la
variable tiempo y le otorga dinamismo a su modelo,
Programación con enfoque de riesgo Conocimiento de la historia natural Definición. de normalidad en el cual se destaca la intervención humana en la
historia de los fénómenos (Figura 6-3).
Figura 6-1. Contribución de la epidemiología al progreso en salud de las comunidades. Los tres sistemas descritos (genético, ecológico y Figura 6-3. Modelo de salud y enfennedad de Peccei.
,.,,-."._:
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"il¡l
104 PARAS/TOLOG/A MEDICA EPIDEMIOLOG/A Y CONTROL DE LAS PARAS/TOS/S 105 .,,.!.
'I
un desafio ético implícito para las generaciones %cobertura %positivo 'I
TABLA6-l
actuales frente al fenómeno de patologías parasita­
dcsanerunicnlo a cisticercosis ',¡'
TRIADA ECOLOGlCA DEL PARASITISMO
rias, en especial, las zoonosis como hidatidosis, 100 1
1. Factor del agente y rcservorio contagiante malaria, neurocisticercosis, sobre las cuales se de­ 90
bería optimizar el control.
Reservorio humano: Profundizando en este análisis hoy en día, los 80
- Casos clínicos cambios provocados por el desarrollo biotecnológico 70
aplicado a la medicina, visualizan con mayor exac­
- Casos inaparentes 60
titud los fenómenos fisiopatológicos, lo que lleva a
- Portadores replantearse el umbral clínico de muchas enferme­ 50
Reservorio animal dades. Sólo los acuerdos de expertos podrán redefinir
los umbrales clínicos, a partir de conceptos opera­ 40
Reservorio inanimado
cionales para cada enfermedad tales como: "caso 30
2. Hospedero y su variación individual clínico", "caso sospechoso o portador", " expuesto
al riesgo", etc. A modo de ejemplo, hoy día, si a un 20
Estructura genética individuo asintomático se le detecta en un examen 10
Inmunidad de salud un quiste hidatídico en una radiografía de
Edad
tórax, será considerado un enfermo aunque nunca o G Saneamiento
haya presentado signos físicos ni síntomas, requisi­
Nutrición tos tradicionales para definirlo como enfermo. A
□ Cisticercosis
Protección por vacunas esto se agrega que las poblaciones varían su per­
cepción de bienestar y salud; es decir, se deben con­ Figura 6-4. Estudio de Reiff que permite observar una correlación inversa entre el grado de saneamiento ambiental y
Hacinamiento siderar los conceptos culturales y sus cambios frente neurocisticercosis en diversos países de América Latina.
a las enfermedades y a las intervenciones que se
3. El ambiente y los mecanismos de interacción
propongan, para valorar su atingencia y pertinencia.
Vías de contagio: PERFIL EPIDEMIOLOGICO DE LOS ductivos mismos. Por otra parte, se observan cam­
Aire ....................................................... respiratorio
Evolución en la calidad de vida CONDICIONANTES DE LA SITUACION bios en la condición social de las familias, con mi­
de las poblaciones DE SALUD gración rural-urbana y predominio reciente de la
Agua y alimentos ...................................... digestivo familia nuclear.
Contacto cutáneo, sexual ............... piel y mucosas En las últimas décadas la población latinoame­ En el mundo se viven diferentes momentos liga­ El aumento general de la expecta_tiva de vida y el
ricana se ha beneficiado con el mejoramiento del dos · al desarrollo socioeconómico, los que tienen consecuente aumento de la población económica­
Vectores (mordeduras, picaduras) .. piel y mucosas.
saneam.iento básico, y con las nuevas estrategias profundas repercusiones sobre la situación de salud mente inactiva de niños y ancianos, presenta nuevos.
Mecanismos de transmisión: adoptadas por el sector salud gracias a campañas y de los recursos destinados a la satisfacción de las desafíos.
emprendidas para combatir las enfermedades infec­ necesidades en este ámbito. Se reconocen tres etapas Los países desarrollados han pasado por ·estas
Congénitos
ciosas que incidían fuertemente en la mortalidad características: tres etapas en forma sucesiva en un período de alre­
Connatales infantil en la década del 70. El compromiso de cada dedor de un siglo. En cambio los países latinoame­
Adquiridos país para invertir en este desarrollo fue mayor o Primera Etapa. Predominan las enfermedades ricanos en vías de desarrollo enfrentan el desafio de
menor según la perspectiva que le dio su organiza­ infecciosas ligadas a la pobreza, la malnutrición y tener que convivir con los tres tipos de problemas
Camivorismo ción política, educacional y sanitaria, su desarrollo la precaria higiene ambiental, laboral y personal; en forma simultánea. La primera etapa está presen­
Contaminación fecal económico, social, sus características demográficas éstas responden al nivel de vida de la población y a te en comunidades rurales pobres, siendo más evi­
Vectoriales y de salud. ciertas medidas de salud pública, en especial cober­ dente aún en poblaciones marginales de las grandes
En América Latina la presencia, prevalencia e tura de agua potable y saneamiento ambiental, así ciudades. La segunda atraviesa transversalmente
Transmisión transplacentaria incidencia de parasitosis en diferentes regiones, es como programas específicos, como las vacunaciones. diversos grupos socioeconómicos sin hacer mayor
Transfusional un muy buen indicador del estado de salud de la Muchas de estas enfennedades están confinadas a distinción, pero identificando varios núcleos socia­
población. Los factores de riesgo de las parasitosis focos geográficos bien delimitados o a grupos hu­ les laborales y geográficos. La tercera etapa es apre­
Lactancia
asociados al nivel de vida tales como hacinamiento, manos de alto riesgo. ciable tanto en determinados niveles generacionales
Accidentes de laboratorio. promiscuidad, analfabetismo, ruralidad, pobreza, (juventud), como en ciudades asfixiadas por el co­
continúan estando presentes en distinta magnitud, Segunda Etapa. Caracterizan a esta etapa enfer­ lapso ambiental o grupos tanto laborales como de
puesto que la situación de la calidad de vida es medades cardiovasculares, el cáncer, los accidentes poblaciones, que soportan una industrialización poco
El explicitar el ámbito social, como un eje del heterogénea. Reiff diseñó un estudio donde comparó cerebrovasculares, los trastornos mentales y enfer­ adaptada al ambiente.
sistema, lleva a cuestionar la responsabilidad de un indicador de saneamiento ambiental con la pre­ medades crónicas y degenerativas.
cada persona o comunidad frente al futuro de las sencia de cisticercosis en tomografías de cerebro, lo
parasitosis en su región. Los Programas de Control que pennitió,o!Js_e_rvar una correlación inversa entre Tercera Etapa. Se agregan los problemas de salud PRESENTACION EPIDEMIOLOGICA
que no se implementen hoy, serán 'los problemas un indicador·de:s'áneamiento ambiental y el porcen­ laborales y ambientales originados tanto por la ex-• DE f:;AS PARASITOSIS
que heredarán las próximas generaciones y será taje de tomografías con diagnóstico de neurocis­ posición en un creciente número de productos quí­
"nuestro legado". Sin duda esta reflexión conlleva ticercosis en los países estudiados (Figura 6-4). micos y sustancias tóxicas como los procesos pro- Las parasitosis pueden presentarse en forma _en-
cl06 PARAS/TOLOGIA MEDICA EPIDEMIOLOGIA Y CONTROL DE LAS PARAS/TOSIS 107

démica, en brotes esporádicos o en forma aislada. Parasitosis emergentes POLITICAS NACIONALES

1
Cada país y localidad tiene problemas diferentes de
acuerdo a los factores condicionantes demográficos, El cambio en las caracteristicas de los hospede­
socioeconómicos, educacionales, ambientales, etc. POLITTCAS DE SALUD
ros en sus caracteristicas inmunológicas, los viajes
Se mencionarán algunos grupos de parasitosis en y migraciones, así como la relación del hombre con
particular, las zoonosis y las emergentes. el medio ambiente, ha provocado la aparición de
PROGRAMA DE PREVENCION
casos aislados de patógenos no habituales, lo que Y CONTROL DEL COLERA
Zoonosis parasitarias obliga a tener en consideración nuevos parásitos en
el diagnóstico diferencial de patologías clásicas.
Se entiende como zoonosis parasitaria a todas las Entre estos se pueden mencionar la criptosporidio­
infecciones parasitarias que se transmiten en forma sis, neumocistosis, microsporidiosis, etc�era.
OTRAS INSTITUCIONES
natural, desde un animal vertebrado a un hombre y LOCALES DE SALUD
viceversa. Se pueden clasificar según el ciclo bioló­ CONTROL Y PREVENCION EDUCACION, FILANTROPICAS,
gico del parásito infectante y de acuerdo a este cri­ RELIGIOSAS, ORGANIZACIONES
terio, se reconocen cuatro tipos.: Definición de prioridades NO GUBERNAMENTALES,ETC

l. Zoonosis directas. Son aquellas zoonosis que Frente al fenómeno parasitario se debe priorizar
se transmiten desde un hospedero vertebrado in­ según la situación epidemiológica de cada país, para
fectado a otro susceptible por contacto directo, por lo cual es imperioso contar con información local y
medio de un objeto (fomite) o por un vector mecá­ generar programas descentralizados y acordes a cada
nico. En este proceso, el parásito prácticamente no realidad. Se debe estudiar la importancia relativa de
sufre cambios ni modifica su desarrollo durante la cada infección parasitaria y los factores o grupos de
transmisión. El proceso ocurrido en cada especie riesgo presentes. Se recomienda mantener la vigilan­
es idéntico. Ejemplo: triquinosis. cia epidemiológica activa frente a los problemas
conocidos y la realización de estudios de foco, con
INDIVIDUO
2. Zoonosis cíclica. Son infecciones parasita­ tamizajes poblacionales periódicos (estudios centi­
rias que requieren para completar su ciclo evoluti­ nelas). FAMILIA
ESTABLECIMIENTOS ORGANIZACIONES.
vo pasar de una a otra especie de vertebrado (hos­ ORGANIZACIONES COMUNIDAD COMUNITARIAS
pedero definitivo e intermediario), sin que inter­ Estrategias y niveles de intervención DE SALUD
venga un hospedero invertebrado. En este proceso
el parásito sufre cambios. Ejemplos: teniasis, hidati­ En la prevención primaria de las parasitosis se PROYECTOS DE
dosis. deben considerar medidas colectivas e individuales, AUTOCUIDADO
generales y específicas. Se propone el modelo de
3. Mctazoonosis. Son parasitosis que se trans­ responsabilidad compartida que ha dado buenos re­
miten por medio de vectores biológicos inverte­ sultados en el control de enfermedades infecciosas.
brados en los que se multiplica y desarrolla. Ejem­ En este modelo existe responsabilidad de las autori­
plo: enfermedad de Chagas, esquistosomosis, dades de salud, la que se va transmitiendo hasta los
difilobotriosis. niveles locales. Sin embargo, como gran responsa­ Figura 6-5. Modelo de responsabilidad compartida para el control de enfermedades infecciosas (V. gr: cólera).
ble de su salud está el propio ser humano, a través
4. Saprozoonosis. Son parasitosis que se desa­ del autocuidado. Se debe educar·desde los primeros
rrollan en hospederos invertebrados y en un años de vida en el valor del autocuidado en todos los
reservorio no animal constituido por sustancias sectores educativos partiendo por la familia, el cole­
orgánicas. Ejemplo: larvas migrantes. gio, los medios de comunicación, etc. (Figura 6-5).
En el modelo de la responsabilidad compartida,
A nivel latinoamericano y con la coordinación de se requiere del trabajo intersectorial y de la coordi­ TABLA 6-2
la OPS, se han generado programas locales de con­ nación de los distintos niveles programáticos, para
trol de zoonosis; por ejemplo, Control Vectorial de el enfrentamiento de problemas tan complejos. Si se PREVENCION DE HIDA'f!DOSIS
Triatomas en Chile, Programa de Control de Teniasis/ desea aplicar este modelo, se debe considerar la Hidatidasis Generales Específicas
Cisticercosis en Brasil y Ecuador, Programas Regio­ entrega de conocimientos técnicos a la población
nales de Control de Hidatidosis, etc. Sin embargo, se para que en forma sencilla y precisa puedan prevenir Medidas colectivas Control de mataderos Educación a faenadores sobre mecanismos de transmisión.
requieren mayores esfuerzos para generar progra­ las diferentes patologías parasitarias por ejemplo en
mas que abarquen toda las zonas comprometidas. el caso de hidatidosis (Tabla 6-2). Vigilancia activa Control veterinario de mascotas.
Ha sido la escasa vigilancia epidemiológica uno de Los programas deben considerar estrategias de
los mayor��,prnblemas, pues la falta de notificación acción frente a casos h¡dices y sus familias y c.ontac.,.,,,. J:t, Individuales Lavado de manos después de No alimentar con vísceras crudas y con bolsas de agua
y registros de los casos humanos, ha impedido valo­ tos, a cómo prevenir la reinfección, a realizar el estar en contacto con perros. a los perros.
rar el problema en su real dimensión . diagnóstico precoz, etcétera.
;:I
li
¡I

•· 108 PARASITOLOGIA MEDICA

Priorización según situación epidemiológica

Los promedios nacionales a menudo enmasca­


DESAFIOS
DELAEPIDEMIOLOGIAPARASITARIA
r
.
.
.

ran problemas específicos de grupos poblacionales, El nuevo milenio traerá nuevos desafíos: los cam­
por lo cual la información local es imprescindible. bios socioantropológicos, las variaciones en la cali­
Además de los indicadores epidemiológicos clási­ dad de vida de las comunidades, el desarrollo de
cos de morbilidad y letalidad, existen los indica­ los medios de transporte y de las comunicaciones
dores de "carga de enfermedad" que intentan di­ aumentarán el concepto de que el mundo es una
m¡msionar el costo social del impacto de una pato­ aldea planetaria, donde todos los seres humanos
logía y constituyen elementos de apoyo para la estamos más cerca y comprometidos en un solo
priorización. Para elaborar dichos indicadores se ecosistema, que debemos cuidar para el bien de la
requiere definir el que se va a utilizar y reunir la humanidad. La parasitología, que estudia la asocia­
información necesaria para construirlo en cada ción entre seres de distinta especie a lo largo de la
patología en particular. En un informe del Banco evolución, irá revelando nuevas evidencias de lo
Mundial,.se mide la carga de una enfermedad com­ maravillosos y sofisticados que son los fenómenos
parando años de vida ajustados en función de la de la naturaleza.
discapacidad (AVAD) perdidos por el fallecimiento SEGUNDA PARTE
por diferentes enfermedades. Para ello, se estimaba
la incidencia de casos por edad, sexo y región de­ BIBLIOGRAFIA
mográfica y se calculaba el número de años de vida
potencial perdidos, multiplicando la duración po­ Apt W. Helmintiasis Humana en América Latina. Preva­
Parasitología clínica
tencial de la enfermedad hasta la curación o el fa­ lencia Actual y sus Factores contribuyentes. Parasitol
llecimiento, por un coeficiente de gravedad que alDia 1987; 11:155-66.
medía el grado de discapacidad que causaba en Banco Mundial. Infonne sobre el desarrollo mundial 1993.
comparación con la pérdida de vida. Invertir en Salud. La salud de los países en desarrollo:
Teniendo en cuenta estos parámetros, en una éxitos y retos a enfrentar. Washington DC. Banco
escala global la carga de enfermedad por malaria Mundial 1993 18-37.
(35,7 millones de AVAD) y la esquistosomosis (4,5 OPS. Boletín Epidemiológico 1996; 17 (3).
millones de AVAD) es mayor que la enfermedad de OPS. La Crisis de la Salud Pública. Reflexiones para el
Chagas (2,74 millones de AVAD). Sin embargo, la Debate. Publicación Científica Nº 540.
carga de enfermedad de Chagas es mayor que la OPS Enfennedad de Chagas en el Sistema Nervioso Cen­
producida por leishmaniosis, lepra, filariosis u onco­ tral, Publicación Científica N° 547.
cercosis. OPS. La mortalidad por enfennedades transmisibles . "Se
ve y no se ve". Boietín de Epidemiología Organización
Panamericana de la Salud 1992; 13 (2).
Ruff P. Importance of environmental healt measures in the
prevention and control of taeniasis and cysticercosis.
Congreso de Cisticercosis 1994, Curitiba, Brasil.

. •.}'_.,,.._.,.
ENTEROPARASITOSIS
Capítulo 7

CARACTERlSTICAS GENERALES
DE LAS ENTEROPARASITOSIS
ANTONIO ATIAS

El tracto digestivo del hombre es capaz de alber­ MECANISMOS DE TRANSMISION


gar una gran variedad de parásitos, tanto protozoos
como helmintos, los cuales pueden ser patógenos o Los mecanismos de transmisión de los entero­
comensales. Desde luego, el poder patógeno que parásitos guardan relación con sus respectivos ci­
ejercen estos parásitos no tiene relación con su ta­ clos evolutivos y, genéricamente, podriamos distin­
maño, puesto que las amibas, que miden algunos guir cuatro modalidades.
micrones, pueden desencadenar un cuadro mortal
y, en cambio, suele ocurrir que una lombriz solitaria Infección por fecalismo
de varios metros de longitud, apenas produzca
sintomatología. El hospedero infectado elimina al medio externo
En la Tabla 7-1 hemos resumido algunas caracte­ las formas infectantes a través de sus heces contami­
rísticas biológicas de las enteroparasitosis que afec­ nando el suelo, luego el hospedero susceptible con­
tan al hombre. En América Latina son importantes trae la infección por ingestión de quistes y ooquistes,
las infecciones intestinales producidas por proto­ esporoquistes y esporas de protozoos y huevos de
zoos y por helmintos y, entre estos últimos, princi­ helmintos (Figura 7-1 ). Esta modalidad de infección
palmente las provocadas por nematodos y cesto­ ocurre en aquellos parásitos cuyos ciclos evolutivos
dos; en cambio, las infecciones por trematodos son se completan en un solo hospedero (ciclo monoxé­
prevalentes en los países asiáticos. nico). De esta manera se determina la infección por
La vía de infección es la digestiva en la gran los protozoos Entamoeba /zistolytica, Giardia duo­
mayoría de los parásitos intestinales y en algunos es dena/is, /sospora belli, C,yptosporidillm parvum,
la vía cutánea. A su vez, los estadios o formas infec­ Blastocystis hominis, Dientamoebafi'agilis, Balan­
tan/es son variados: en los nematodos son huevos tidium coli y muy probablemente los microsporidio$.
o larvas; en los cestodos son metacestodos (o for­ intestinales Enterocytozoon bieneusi y Encepha­
mas larvales) representadas por cisticercos, plero­ litozoon intestina/is, y por los geohelmintosAscaris
cercoides y huevos (como ocurre con Hj,menolepis lumbricoides, Trichuris trichiura eHymenolepis na­
nana); y en los trematodos, son metacercarias. na. Por este mismo mecanismo, se adquiere la in-

HUESPED INFECTADO HUESPED SUSCEPTIBLE


(INTESTINO) AMBIENTE (INTESTINO)

Quistes, ooquistes y huevos


(Fecalismo)

Protozoos: Entamoeba histolytica Helmintos: Ascaris /11111bricoides


Giardia duodena/is Tric/wris trichiura
/sospora belli Hymenolepis nana
Cryptosporidium sp.
Balantidium coli
Protozoos comensales, etc.

j
Figura 7-1. Infección por fecalismo.

.
112 P11RASITOLOG/A MEDICA CARACTERIST/CAS GENERALES DE LAS ENTEROPARAS/TOSIS 113

TABLA 7-l HUESPED SUSCEPTIBLE


HUESPED DEFINITIVO HUESPED INTERMEDIARIO
ALGUNAS CARACTERISTICAS DE LAS PRINCIPALES ENTEROPARASITOSIS DEL HOMBRE (INTESTINO) (TEJIDOS) (INTESTINO)

Parasitosis Agentes Forma ilifectante Mecanismos de ilifección Fecalismo Carnivorismo


l. PROTOZOOS
Amibiasis Entamoeba histolytica quiste fecalismo
Balantidiosis Balantidium co/i quiste fecalismo Metacestodos y quistes
Giardiasis Giardia duodena/is quiste fecalismo (Carnivorismo)
lsosporosis /sospora belli ooquiste fecalismo - Sarcocystis bovi/10111i11is y S. s11i/10minis
Criptosporidiosis Cryptosporidi11111 pan•wn ooquiste fecalismo - Cestodosis intestinal: Taenia saginata y T. so/ium
Ciclosporosis Cic/ospora cayetanensis ooquiste fecalismo Diphyllobothrium sp.
Sarcocistosis Sarcocystis hominis quiste ingestión de carne de cerdo o vacuno
Microsporidiosis Enterocytozoon bieneusi esporas fecalismo Figura 7-2. Ciclo de relación predador-presa. Infección del hombre por carnivorismo.
Encephalitozoon intestina/is
Blastocistosis Blastocystis hominis zoítos fecalismo
Dientamebosis Dientamoeba fragilis trofozoíto fecalísmo (carne de vacuno) y Diphyllobothrium sp. (carne de
ción por diversos protozoos comensales, principal­
Protozoos comensales quistes fecalismo peces).
mente Entamoeba coli, lodamoeba bütschlii, Endo­
11. NEMATODOS limax nana y Chilomastix mesnili.
. ,'¡' Infección por el ciclo ano-mano-boca
Ascariasís Ascaris lumbricoides huevo larvado fecalismo
,, Infección por carnivorismo
,, Tricocefalosis Tric/mris trichiura huevo larvado fecalismo Es el mecanismo de infección que típicamente
;;, Anquilostomosis Ancylostoma duodena/e larva filariforme penetración por In piel o por vía oral ocurre en la enterobiosis (Figura 7-3); en efecto, la
r;l¡
Ocurre con aquellos parásitos que presentan ci­
Necator americanus larva filariforme penetración por la piel hembra grávida del Enterobius vermicularis migra
clos evolutivos.complejos, con interposición de hos­
Estrongiloidosis Strongyloides stercora/is larva filariforme penetración por la piel por el intestino grueso del hospedero, fuerza el es­
pederos intennediarios (ciclos heteroxénicos). En

l
',
Entembiosis Enterobius vermicularis huevo larvado ciclo ano-mano-boca fínter anal y deposita los huevos en la piel del periné,
estos casos, se establece entre los hospederos una
Anisakiosís Anisakis simp/ex, larvas ingestión de carne cruda de peces provocando la contaminación del medio externo, lo
relación de predador y presa (Figura 7-2). El preda­
Pseudoterrarwva sp. que hace años denomináramos "el ambiente oxiu­
'I
dor siempre presenta la infección en el intestino,
,¡ Tricostrongilosis Trichostrongylus spp. larvas ingestión de alimentos contaminados riótico". El hospedero susceptible o los hospederos
albergando la fase sexuada de los parásitos (hospe­
,, Capilariosis intestinal Capillaria plrilippinensis larvas ingestión de peces crudos
l Fisalopterosis P/rysaloptera caucasica larvas no se conoce
dero ·definitivo) y cuyas fonnas infectantes salen al
exterior con las heces, dando ocasión para que se
ya infectados, adquieren la infección o se reinfectan
fácilmente con estos huevos que son ya infectantes··
Esofagostomosis Oesophagoston11111 spp. ¿larvas, huevos? no se conoce y muy livianos.
infecte la presa por fecalismo y el parásito se desa­
111. CESTODOS rrolle y multiplique asexualmente en sus tejidos
(hospedero intennediario). El ciclo se completará Infección por la piel
Teniasis Taenia so/ium larva (cisticerco) ingestión de carne cruda de cerdo cuando el hospedero susceptible ingiera carnes cru­
Taenia saginata larva (cisticerco) ingestión de carne cruda de vacuno das o mal cocidas que contengan quistes de protozoos Algunos helmintos intestinales eliminan al ex­
Difilobotriosis Diphyllobotlrri11111 latwn larva (plerocercoide) ingestión de peces de agua dulce o estados larvales (metacestodos) de cestodos. terior, junto con las heces del hospedero, larvas
Diphyllobot/rri11111 pacific11111 larva (plerocercoide) ingestión de peces de mar Este es el mecanismo de infección del hombre rhabditifonnes no infectantes (como el Strongyloi­
Hymenolepiosis Hymenolepis sp. huevo embrionado fecalismo por Sarcocystis hominis (carnes de cerdo y de vacu­ des stercoralis) o huevos en avanzadas etapas de
Dipilidiosis Dipylidi11111 canimrm cisticercoide ingestión accidental de pulgas no), Taenia solium (carne de cerdo), Taenia saginata desarrollo (como típicamente ocurre con las uncí-
Railletinosis Rail/etina spp. se desconoce ¿ingesta de honnigas infectadas?
lnermicapsiferosis fllermicapsifer spp. se desconoce ¿ingesta de artrópodos infectados?
Bertielosis Bertie/la studeri se desconoce se desconoce
IV. TREMATODOS HUESPED INFECTADO HUESPED SUSCEPTIBLE
AMBIENTE
(INTESTINO) (INTESTINO)
Fasciolopsiosis Fasciolopsis buski larva (metacercaria) ingestión de plantas acuáticas
¡;
1:,
Equinostomosis Ec/1inosto111a sp. larva (metacercaria) ingestión de caracoles o peces de agua dulce
11 Heterofiosis Heterop/ryes heterop/ryes larva (metacercaria) ingestión de peces de mar

¡
Metagonimosis Metagoninms yokogawai larva (metacercaria) ingestión de peces de mar
HUEVOS
V. ACANTOCEFALOS '-----------(AMBIENTE OXIURJOTICO) -----------'
ANO-MANO-BOCA
Macracantorincosis Macracanthorlrynch11s cisticantos fecalismo
hirudinaceus Enterobius vennicularis
Moniliformiosis Moniliformis moniliformis cisticantos fecalismo
Figura 7-3. Infección por el ciclo ano-mano-boca.
11.:i PARASITOLOGIA MEDICA CARACTERISTICAS GENERALES DE LAS ENTEROPARASITOSIS 115

AMBIENTE HUESPED SUSCEPTIBLE FRECUENCIA DE LAS REINFECCIONES


TINO) (INTESTINO)

[ """' º'"""""" LARVAS FILAR1FORMES ?---...:......___ HUEVOS/LARVAS RABDITOIDES <----�


(piel)

Ancylostoma duodena/e
(fecalismo)
PRESION DE INFECCION

INMUNIDAD
NATURAL
SUSCEPTIBILIDAD DEL HUESPED

FACTORES
GENETICOS
NUTRICION
Necator americanus
Strongyloides stercoralis
AMBIENTALES SOCIOECONOMICOS

Figura 7-4. Infección por la piel.


Figura 7-6. Esquema del proceso dinámico de la frecuencia de las reinfecciones, que explica la endemicidad estable por
enteroparásitos en la población.
narias y ocasionalmente con el S. stercoralis), los calidades de la disposición de excretas, del agua de
cuales rápidamente evolucionan a larvas filarifor­ bebida y de riego, de la eliminación de basuras, de reinfecciones repetidas en la población, dependerá ción de las típicas úlceras producidas por amibas o
mes. Por su capacidad de penetrar la piel, estas moscas, y control de los mataderos. de la presión de infección y de la susceptibilidad del por el balantidium.
larvas filariformes inician la infección del hospede­ Los factores socioeconómicos y la cultura higié­ hospedero (Figura 7-6). El concepto de presión de La mayoría de los enteroparásitos ejerce su ac­
ro susceptible (Figura 7-4). nica tienen una importancia obvia y decisiva en la infección se refiere al número·de exposiciones de un ción patógena desde su hábitat intestinal, pero algu­
DISEMINACION DE LA INFECCION difusión de las enteroparasitosis; basta señalar la hospedero, en un lugar geográfico determinado y nos migran y de esta manera provocan daño. Entre
EN LA NATURALEZA capital gravitación de un manipulador de .alimentos por un tiempo dado. Los factores involucrados en la los protozoos, la Entamoeba histolytica puede pro­
con deficientes hábitos higiénicos o los mitos y creen­ presión de infección son de dos tipos: ambientales ducir graves cuadros sistémicos y lo mismo puede
Provocada la contaminación del suelo por las cias de los hombres y de las comunidades, en rela­ y socioeconómicos, íntimamente ligados entre sí, ocurrir, aunque en rarísimas ocasiones, con el Ba­
formas infectantes de los parásitos, la posibilidad ción con los mecanismos de transmisión de las pa­ puesto que el ambiente influye en la situación so­ /antidium co/i; en los pacientes con SIDA, Cryptos­
que vuelvan a infectar directamente por fecalismo o rasitosis. cioeconómica de las poblaciones y, a su vez, la ·poridium parvum y Encepha/itozoon intestina/is
indirectamente por carnivorismo, dependerá de fac­ La susceptibilidad del hospedero a las infeccio­ actividad humana gravita en el ambiente. Para suelen provocar importantes infecciones generali­
tores climáticos, del saneamiento básico y de facto­ nes parasitarias depende de su inmunidad natural, graficar mejor los factores que interactúan en la zadas; en• cambio, la G. duodena/is, aun cuando se
res socioeconómicos y culturales de la población de factores genéticos y de su nutrición, tal como se presión de infección, se podria decir que los factores la encuentre en la vía biliar distal, debe ser consi­
(Figura 7-5). Los factores climáticos actúan princi­ expone en otros capítulos de este libro. ambientales son los responsables de la difusión y derada como exclusivamente intestinal. De los
palmente respecto de la sobrevida de esas formas La prevalencia de las enteroparasitosis, con pe­ desarrollo de las formas infectantes de los parásitos helmintos, el más errátil y productor de complica-··
infectantes de los parásitos en el ambiente externo, queñas variaciones, permanece inalterable en el tiem­ intestinales, y los factores socioeconómicos son res­ ciones extraintestinales es el áscaris; por su parte,
guardando una estrecha dependencia con la tempe­ po. Las cifras actuales son increíblemente iguales a ponsables de la contaminación del ambiente con las formas larvales del áscaris, de las uncinarias y
ratura y la humedad ambientales y el tipo del suelo. las obtenidas hace veinte años y probablemente sean estas formas infectantes. del estrongiloides cumplen un ciclo extraintestinal
Particularmente interesante es la influencia del gra­ muy similares a las que arrojarán futuras encuestas. de desarrollo, con paso previo por los pulmones,
do de humedad (determinado por el nivel de llu­ Es decir, de hecho existe una endemicidad estable PATOLOGIA DE LAS ENTEROPARASITOSIS donde pueden provocar un sindrome de Loeffier,
vias) en la viabilidad y maduración de los huevos de en las enteroparasitosis y este nivel estable es el antes de alcanzar su hábitat intestinal definitivo.
áscaris y tricocéfalos y, por ende, en su prevalencia. resultado de un proceso dinámico de reinfecciones Los enteroparásitos se localizan a lo largo del Los parásitos de los tejidos que utilizan la boca
El concepto de saneamiento básico encierra las repetidas. La frecuencia con que se producen estas intestino delgado y del intestino grueso. La relación como vía de infección, pueden producir algún daño
que guardan con la mucosa intestinal es variable y, en el intestino sin que sean necesariamente ente­
por ende, el daño directo que en ella provocan es roparásitos; por ejemplo, las hembras de Trichinella
ENTEROPARASITOS también diverso. Los áscaris son parásitos del lumen spiralis que se ubican en el interior de la mucosa
intestinal y tienen poco contacto con la mucosa. intestinal, o los esquistosomas que producen daño
Algunos helmintos se fijan a un punto de la mucosa, durante la postura de huevos. Otras veces, parásitos
sin producir daño histológico ostensible, por medio esencialmente tisulares como el Trypanosoma cruzi,
CONTAMINACION FECAL DEL SUELO de ventosas, botrias o ganchítos (cestodos), de ex­ son capaces de dañar profundamente el tubo diges­
pansiones alares (oxiuros) o de terminaciones pilo­ tivo generando un megaesófago o un megacolon.
sas (tricocéfalo). Ciertos protozoos inducen cam­ La mayoría de las enteroparasitosis son preva­
bios superficiales de la mucosa, con hiperemia, au­ lentes en los niños debido a los mecanismos de
FACTORES mento del moco y diversos grados de alteración del transmisión por fecalismo. También la enterobiosis
SANEAMIENTO BASICO es más importante y produce mayor sintomatologia
SOCIOECONOMICOS Y CULTURALES epitelio (giardia) o llegan a producir destrucciones
l· celulares (coccidios). También se puede encontrar en las edades tempranas de la vida.. En cambio, los
daño evidente de la pared, como el provocado por que se transmiten por carnivorismo, son más fre­
! Figura 7-5. Factores que inciden en la difusión de las enteroparasitosis en la naturaleza.
las uncinarias al "morder" la mucosa, o la forma- cuentes en los adultos. Una característica de las
11:6 PARASITOLOG/A MEDICA CARACTER/STICAS GENERALES DE LAS ENTEROPARAS/TOS/S 117

enteroparasitosis es la falta de preferencia en la Otros síntomas dificiles de especificar o de Síntomas alérgicos inmunocomprometidos puede ser útil la detección
infección por uno u otro sexo; la excepción es el relacionar con las parasitosis, como la cefalea, la de inmunoglobulinas específicas para evaluar la res­
absceso hepático amibiano, el cual es más frecuente astenia y la adinamia, se observan sobre todo en la El.prurito anal, nasal y vulvar es frecuente en puesta inmune frente al parásito (IgA en giardiasis).
en el hombre. amibiasis crónica. enterobiosis. También se describe bronquitis asma­
El poder patógeno de las enteroparasitosis se tiforme en niños pequeños con enteroparásitos. La Exámenes complementarios
produce mediante diversos mecanismos ya discuti­ Síntomas digestivos urticaria se puede presentar, pero en raras ocasio­
dos en el Capítulo3: El hospedero. La relación hos­ nes. Hemograma. En la enteroparasitosis se altera
pedero-parásito. Todos ellos ejercen daño por acción Aunque muy frecuentes, son vagos e inespecífi­ de diversa manera. Puede aparecer una anemia dis­
expoliatriz, pero también es importante la acción cos. DIAGNOSTICO Y EVOLUCION creta en las formas disentérica y extraintestinal de
hematofágica de las uncinarias, de los tricocéfalos, Alteraciones del tránsito intestinal. En las ente­ la amibiasis y en la balantidiosis; o bien, una ane­
de las amibas y del balantidium. Mención especial roparasitosis es frecuente la diarrea que puede adop­ Como la sintomatología de las enteroparasitosis mia: microcítica e hipocrónica en la uncinariosis y
merece el Diplzyllobothrium latum, que provoca daño tar diversos tipos y aspectos: siempre líquidas y con no es característica, el diagnóstico es sólo presuntivo en la tricocefalosis masiva o macrocítica en la
por competencia metabólica con la vitamina B12. La gran número de evacuaciones diarias en las coccidio­ y debe ser confirmado por exámenes complementa­ difilobotriosis (Véase el Capítulo 61: Anemia y pa­
acción mecánica no sólo concuerda con el tamaño de sis intestinales (isosporosis, criptosporidiosis, rios, que son analizados en este libro en su conjunto rasitosis). En la serie blanca, se describe leucocito­
los parásitos, como ocurre en la obstrucción de con­ ciclosporosis y sarcocistosis) y en la microsporidiosis en la Sexta Parte: Diagnóstico de laboratorio. sis y desviación a la izquierda en el absceso hepá­
ductos o del intestino por áscaris, sino también me­ intestinal (provocada por Enterocytozoon bieneusi y tico amibiano y, también, la aparición de eosinofilia
diante barreras a la absorción de nutrientes observa­ Enceplzalitozoon intestinalis); líquidas o pastosas en Exámenes parasitológicos que suele ser muy importante en isosporosis, trico­
da en giardiasis, estrongiloidosis y ascariasis. Las cefalosis masiva, síndrome de Loeffler, uncinariosis


himenolepiosis, anquilostomosis, ascariasis, estron­
manifestaciones sistémicas o extraintestinales en las giloidosis y formas diarreicas de la amibiasis; o bien, Los más utilizados en las enteroparasitosis son y estrongiloidosis (Ver el Capítulo 62: Eosinofilia
enteroparasitosis se explican por la acción tóxica, puede ser de carácter disentérico en las colitis( el de deposiciones, el método de la cinta adhesiva y parasitosis).
lítica o alérgica en contra del hospedero. amibiana, balantidiana o tricocefalósica. La constipa­ (Graham) para la enterobiosis, la identificación de
ción o estitiquez se observa en ciertos períodos evo­ helmintos y pruebas serológicas. Exámenes por imágenes. En el estudio radioló­ b
il
SINTOMATOLOGIA lutivos de la amibiasis y en el megacolon chagásico El examen de deposiciones tiene su máximo ren­ gico de tránsito intestinal o en colangiografias, se :11
DE LAS ENTEROPARASITOSIS es el síntoma predominante. La observación de alter­ dimiento cuando es seriado, porque suelen existir pueden observar áscaris por contraste. Igualmente,
¡J
Los parásitos del intestino se caracterizan por el
nancia de periodos de dian·ea y estitiquez es de rela­
tiva frecuencia en la amibiasis.
períodos en los cuales disminuye en forma notable el
número de trofozoítos, quistes o huevos que son di­
la radiología permite diagnosticar el síndrome de
Loffler u observar ascenso e inmovilidad diafrag­ :1
pr
polimorfismo de la sintomatología puesto que no ficilmente detectados mediante los métodos corrien­ mática y pequeño derrame pleural en el seno costo­
!
ofrecen signos ni síntomas patognomónicos. Tam­ Dolor abdominal. En las parasitosis intestina­ tes de laboratorio. Por lo general, para lograr una diafragmático derecho en algunos casos de absceso
bién es frecuente la tendencia a la evolución crónica les, suele adquirir diversos caracteres. Lo más co­ seguridad aceptable, se solicitan tres exámenes hepático amibiano. También pa,ra el diagnóstico de
este absceso hepático son determinantes los resulta­ 1
de los síntomas, con alternancia de episodios agu­ rriente es el dolor cólico intestinal intermitente, las seriados día por medio, y en el caso de las amibiasis
dos y de silencio sintomatológico; sin embargo, epigastralgias, a veces similares a una úlcera péptica, pueden ser necesarios seis exámenes seriados. La dos de la cintigrafia, tomografia axial computarizada 1,
l.
pueden presentarse balantidiosis y amibiasis de o dolores seudoapendiculares. identificación de gusanos permite diagnosticar, en el y resonancia nuclear magnética. :
comienzo brusco y curso sobreagudo, así como los caso de proglótidas maduras o grávidas, si se trata de
¡;¡
l
/
cuadros clínicos de las coccidiosis y de las Meteorismo. Se observa frecuentemente y mu­ Taenia saginata o T. solium por el número de rami­ Sondeo duodenal. Aunque se usa poco en la
microsporidiosis intestinal que son esencialmente chas veces, cuando es marcado y molesto, es el ficaciones uterinas primarias; en el caso de ejempla­ clínica diaria, puede ser de utilidad en giardiasis y
de tipo agudo. principal motivo de consulta. ·i. res de áscaris, no existen mayores dificultades para coccidiosis intestinal.
Los síntomas de las enteroparasitosis se agru­ su diagnóstico; gusanos más pequeños, como los
pan habitualmente en generales, digestivos, psíqui­ Complicaciones quirúrgicas. Puede presentar­ oxiuros, son descritos habitualmente por el paciente Biopsias. Las de intestino delgado son muy úti­
cos o nerviosos y alérgicos. se compromiso peritoneal y hasta perforaciones in­ 1 por su aspecto filiforme. Sin embargo, es común que les para el diagnóstico de microsporidios, coccidios,

i':i
testinales en amibiasis y balantidiosis, íleo mecáni­ el médico deba hacer diagnóstico de "seudoparásitos", giardia y estrongiloides. En casos de amibiasis y
Síntomas generales co por obstrucción intestinal por áscaris o vólvulo 1 cuando se trata, por ejemplo, de larvas de moscas en esquistosomosis, se utilizan biopsias rectales.
intestinal en el megacolon chagásico. pañales de niños pequeños o de lombrices de tierra La evolución de las enteroparasitosis, en gene­
Alteraciones del apetito. Su forma más fre­ observadas en los servicios higiénicos. ral, tiende hacia la cronicidad. La infección se per­
cuente es la anorexia, aunque algunos pacientes con Síntomas psíquicos y nerviosos Los exámenes serológícos, si bien son de mayor petúa por años, sea por longevidad de los parásitos
teniasis pueden presentar bulimia. utilidad en el diagnóstico de parásitos tisulares, son (las lombrices solitarias pueden vivir diez, quince o
más años, y el tricocéfalo perdura por siete o más
I¡ ,
Adquieren especial importancia en la entero­ también de indudable ayuda para distinguir entre la
Aberraciones del apetito. Especialmente en pa­ biosis, en la cual se observa corrientemente insom­ infección amibiana de la amibiasis invasora, puesto años), sea por las reinfecciones y sobreinfecciones
cientes con tricocefalosis masiva, se observa geo­ nio, sueño intranquilo o bruxismo; en algunos casos que la diferenciación está basada en los caracteres de una misma especie de parásitos, como ocurre 11,
fagia o "pica". de teniasis se desencadena un notorio cambio de morfológicos del trofozoíto hematófago y en la apa­ típicamente en la enterobiosis, en la cual el parásito

Disminución del peso corporal. Se registra en


carácter y profunda preocupación y vergüenza de
sentirse parasitado. Algunos pacientes con ascariasis,
rición de anticuerpos detectables por reacciones se­
rológicas (Reacción de Irimunofluorescencia Indi­
no vive más de unos tres meses, pero la infección se
prolonga durante años por las frecuentes reinfeccio­
1 !
: !:
las coccidiosis y en las lombrices solitarias; pero la himenolepiosis y más raramente con otras helmin­ recta, ELISA). En otras protozoosis, se han aplica­ nes. Los cuadros agudos suelen ser exacerbaciones
relación frecuente que existe entre la enteroparasitosis tosis, pueden sufrir crisis convulsivas epileptiformes, do métodos serológicos de apoyo al diagnóstico de sobre un fondo crónico, como se observa en giardiasis
y el estado nutritivo determina-que la baja del peso las cuales son debidas a la acción de los parásitos en infecciomi"s ·en las· cuales no se encuentran elemen­ o amibiasis; típicamente. agudos y autolirnitados, i
pueda obedecer a factores ·más complejos y el pará­ un terreno predispuesto: el parásito no es la causa, tos parasitarios en las deposiciones, como puede como se ve en las coccidiosis, o bien sobreagudos e 1
l
sito ayudar a su aparición. sino un factor desencadenante de la crisis. ocurrir en algunos casos de giardiasis. En pacientes incluso fulminantes, como se describe en ciertos

:".!
PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 8
casos de amibiasis, criptosporidiosis o microspo­
ridiosis.
Si una vez identificado el parásito y luego de la
prescripción de la terapia correspondiente, las mo­
AMIBIASIS
De estas características generales, se desprende lestias continuaran, el médico debe asegurarse la VIVIANA REYES
que el médico frente a un cuadro clínico digestivo de persistencia de la infección mediante exámenes de
etiología no precisada, debe pensar en una entero­ control, antes de emprender nuevas curas medica­
parasitosis y pedir los exámenes confirmatorios. mentosas.
Puesto que muchos pacientes pueden estar para­ Como es frecuente que se produzcan reinfeccio­
sitados sin que esto signifique enfermedad parasita­ nes y sobreinfecciones, sea del mismo paciente o del
·ria, el criterio clínico es el que debe determinar la grupo familiar, es imprescindible impartir tratamiento
verdadera importancia del hallazgo de un parásito. específico, además de una adecuada información o Definición histolytica existe en el colon en dos formas: el tro­
Puede ocurrir que este parásito sólo represente un educación sanitaria para evitar la futura parasitación fozoíto o forma móvil y el quiste inmóvil.
epifenómeno de otra enfermedad, lo cual nunca debe del enfermo y del grupo con el cual convive. La amibiasis es la infección del intestino grueso Los trofozoítos (Figura 8-1) miden entre 20-
olvidarse. causada por Entamoeba histolytica en el hombre. 50µm, tienen motilidad orientable, presentan ecto­
Sus manifestaciones pueden variar desde portado­ plasma claro y bien delimitado, con delgados seu­
res asintomáticos a enfermedad de grado variable. dopodios digitiformes y endoplasma finamente
granuloso, con un núcleo excéntrico y el cariosoll)a
central y puntiforrne. Habitan en el lumen, pared o
AMIBIASIS INTESTINAL en ambos lugares del colon. Se multiplican por fi­
sión binaria, crecen mejor en condiciones anaerobias Id
BIOLOGIA y requieren de la presencia de bacterias o de sustratos -i]
tisulares para sus requerimientos nutritivos. Cuan­
Varias especies de amibas pueden habitar el trac­ do· hay diarrea o disentería, los trofozoítos salen en
to intestinal del hombre, pero de ellas sólo E. his­ el contenido fecal y presentan muchas veces eritro­ ,.
tolytica parece ser patógena. Dentro de E. histoly­ citos fagocitados, lo que es patognomónico de
tica se han descrito diferencias morfológicas en el amibiasis.
tamaño de los organismos, lo que ha llevado a sub­ Cuando no hay diarrea, los trofozoítos suelen
divisiones conocidas previamente como fonnas o enquistarse antes de abandonar el intestino, rodeán­
razas minutas y magnas. En la actualidad, se con­ dose de una pared muy resistente a los cambios
sidera que la cepa caracterizada por tamaño peque­ ambientales, a las concentraciones de cloro en agua
ño y carente de virulencia es E. harhnimni y que la potable y a la acidez gástrica. Los quistes maduros
cepa de mayor tamaño corresponde a E. histolytica, al ser ingeridos por un nuevo hospedero repiten el
que sería la amiba patógena para el hombre. E. ciclo.

Figura 8-1. Trofozoítos de Entamoeba histolytica (microscopia electrónica de barrido). (Gentileza del Biol. Sr. Arturo
Gonzá_ lez Robles. Centro de Investigación y Estudios Avanzados del IPN, México).

_l
·-
.
PARASITOLOGIA MEDICA AM/8/ASIS 121

nal deficiente, favorecen la transmisión de la enfer­


medad. La contaminación fecal es frecuente en jar­
dines infantiles y sala cuna e instituciones de en­ Invasión
fennos. extraintestinal
La contaminación fecal-oral directa durante el
contacto sexual bucoanal produce gran número de

t
infecciones en varones homosexuales.
A través de la ingestión de agua de bebida y de Intestino grueso
alimentos contaminados, de la deficiente manipula­
ción de los alimentos y a través de vectores mécanicos
como moscas y cucarachas, se puede transmitir la _,,/
Figura 8-2. Quiste de E11tamoeba l,istolytica. infección en fonna indirecta en especial en aquellas
regiones del mundo mal saneadas, con déficit de HOMBRE
El quiste es la fonna infectante y predomina en agua potable y redes de alcantarillado que permiten FECALISMO
desintegración
las deposiciones de portadores asintomáticos o de la contaminación fecal del suelo y agua. En los bro­ AMBIENTE
fonnas leves de la enfennedad (Figura 8-2 y Lámina tes epidémicos, el grado de esta contaminación es 1QuisteS I•
1). Los quistes son de tamaño variable y miden 5-20 muy alto. . t�tr�g���s
¡.un. Las fonnas quísticas iniciales (prequistes) con­ Se ha calculado que la prevalencia promedio de
tienen cuerpos retráctiles de cromatina o barras la amibiasis en el mundo es de 10%, pero según la
cromatoidales, una vacuola yodófila y un solo nú­ población estudiada, alcanzando a un 50-80% en
cleo, el cual se divide por fisión binaria para fonnar países poco desarrollados y zonas tropicales. Es más
el quiste maduro tetranucleado; por Jo tanto, los frecuente en adultos y tiene igual distrubución por
quistes en deposiciones pueden tener de uno a cuatro raza y sexo, con excepción del absceso hepático que
núcleos. Estos quistes sobreviven fuera del hospe­ es más frecuente en hombres. Qni�tes.
dero por días o semanas, en especial en condiciones La infección es mucho más frecuente que la en­
de baja temperatura y humedad. Constituyen el es­ fennedad, puesto que sólo alrededor del 10% de los
tado infectante en el ciclo de vida del parásito y así infectados enfennaria. La amibiasis invasora está
la infección se transmite de un hospedero a otro, con concentrada en pocos lugares "del mundo: México,
la ingestión de alimentos o agua contaminad� con Sudamérica occidental, sur de Asia y sudeste y oeste
deposiciones. de Africa.
Una vez en el intestino delgado, ocurre una divi­ El estudio de los patrones de isoenzimas de ami­
sión resultando ocho trofozoítos de un quiste. Ocu­ bas aisladas del hombre ha llevado a la clasificación 1
rrido el desenquistamiento, los parásitos resultan en de cepas patógenas y no patógenas, según los zi­

-- r. -
trofozoítos móviles, activos y potencialmente pató­ modemas. Se conocen más de 20 zimodemas, de los I! . -
genos, los que pueden causar colitis. cuales la mitad están asociados a ulceración intesti­
nal o a absceso hepático. Incluso en zonas de ende­
EPIDEMIOLOGIA mia sólo un 10% de los infectados tienen zimodemas
virulentos de E. histolytica y una minoría sufre de
El hombre es el principal hospedero y reservorio enfennedades con síntomas.
de E. histolytica. Como los trofozoítos mueren rá­ En hombres homosexuales, alrededor del 20- 30%
pidamente fuera del intestino, no tienen importan­ están infectados con E. histo/ytica pero la enfenne­
cia en la diseminación de la infección; el quiste es dad propiamente tal es rara, aún en pacientes con
la fonna infectante por cuanto es capaz de resistir SIDA. Las cepas aisladas de homosexuales en USA,
a la cloración del agua y las condiciones ambienta­ Gran Bretaña y Canadá presentan en su mayoría
les; se elimina del agua por filtración y se destruyen zimodemos no patógenos.y la prevalencia de anti­
por cocción. cuerpos séricos a E. histolytica es baja, lo que su­
La expulsión asintomática de quistes es la que giere que las cepas virulentas son actualmente raras
origina las nuevas infecciones; un portador crónico en países desarrollados.
puede excretar varios millones de quistes diariaIJJ.en­
te. La dosis infectante suele exceder de 10=. PATOLOGIA
La transmisión de la infección puede ocurrir por
varios mecanismos (Figura 8-3). La vía fecal-oral, en Las lesiones de la amibiasis intestinal;son las
general por contacto directo persona a persona, úlceras que consisten en la pérdida de sustancia de
favorecido por condiciones sanitarias deficientes, la mucosa,. cubiertas por exudado amarillento cen­
hacinamiento, pobreza, ignorancia, retraso mental y tral, que se encuentran por sobre una zona socavada
otros factores qne repercuten en la higiene perso- de necrosis que es más extensa e_n 1� submucosa y Figura 8-3. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión de E11ta111oeba histo/ytica.
T
122 PARASITOLOGIA MEDICA AMIBIASIS 123

grandes masas de tejido fibroso de granulación no se conoce exactamente. La capacidad invasora de


corno secuela de las úlceras, constituyendo el una cepa se relaciona con su capacidad fagocitarla
arneborna. (eritrofagocitosis), su producción de colagenasa y
Ha sido descrita la inflamación difusa de la mu­ de una proteína citotóxica inrnunogénica, su resis­
cosa intestinal y en esta forma de presentación, el tencia a la reacción inflamatoria del hospedero y lo
,,'· diagnóstico diferencial es dificil. Histológicamente,
hay una lesión inflamatoria difusa que es indistingui­
más importante, su capacidad de lisis celular des­
pués del contacto con la célula hospedera. La adhe­
ble de la inflamación inespecífica presente en otros rencia a esta célula mediada por una lecitina y luego

.n
:111 tipos de colitis. La lámina propria contiene un infil­ por una proteina formadora de poros (arnebaporo),
lj·
trado de células plasmáticas, linfocitos, neutrófilos y altera la membrana celular con posterior citolisis in­
eosinófilos. El infiltrado se encuentra además en la testinal y de los neutrófilos atraídos al lugar por
superficie epitelial y frecuentemente hay exudado, el enzimas tipo proteinasas y fosfolipasa A. Por lo
cual puede contener amibas, las que también se pue­ tanto, la liberación de productos tóxicos produce
den encontrar en los bordes de las úlceras. una reacción inflamatoria que progresa hacia la des­
trucción de la mucosa y posteriormente, a la forma­
PATOGENIA ción de úlceras.
La virulencia de las cepas se puede demostrar
No se conocen del todo los factores que modu­ experimentalmente por su capacidad de producir
lan la infección por E. histolytica, pero desempeñan abscesos hepáticos en hamsters inoculados intra­
cierto papel tanto el estado de hospedero como la hepáticamente e in vitro, por pruebas que determi­
virulencia del parásito. La susceptibilidad del hospe­ nan enterotoxicidad enfrentando tejido colónico con
dero puede aumentar frente a dietas ricas en carbohi­ lisados de amibas que contienen toxinas, especial­
dratos, uso de corticoides, la desnutrición proteica, mente proteinasas.
el embarazo, la infección por Vlli y otros estados de Estudios genéticos han permitido la identifica­
inrnunodepresión. A nivel local en el intestino, la ción estructural de algunos factores patogénicos
alteraciones en la producción o composición del como lo es la lecitina de adherencia o adhesina y
moco, puede afectar la susceptibilidad del hospe­ proteinasas cisteína con efecto enterotóxico. Se ha
dero a la invasión por amibas, por cuanto glicopro­ establecido diferencias de actividad de estas últimas
teinas presentes en el moco se fijan con avidez a una entre cepas de menor y mayor virulencia.
mólecula adherencia! de la superficie de los trofo-
. zoítos de E. histolytica, bloqueando su unión a las SINTOMATOLOGIA
células del hospedero. Las condiciones de pH, p02
y flora bacteriana del colon también influyen en el Los pacientes con amibiasis intestinal pueden ·
desarrollo de las amibas, favoreciéndolo un pH neu­ variar clínicamente desde asintomáticos a enfermos
tro o alcalino, una p02 baja y el aporte de nutrientes con cuadro de tipo colitis ulcerativa.
por parte de las bacterias asociadas.
El estudio en los trofozoítos de los patrones de Portador asintomático
movilidad electroforética de cuatro enzimas, ha per­
mitido definir 22 zimodemas dte E. histolytica de los Este sujeto vive en buena relación con el parásito
Figura 8-4. Amibiasis intestinal. (A) Ulceras amibianas. (B) Colitis fulminante. (C y D) Amibas en capilares sanguineos cuales nueve son virulentos o pat�enos y se han y la E. histolytica reside como "comensal" en el
de la submucosa intestinal ( casos A, C y D del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica; Caso B del Dr. Antonio Alías). aislado de pacientes con enfermedad agresiva; to­ lumen intestinal, sin presentar lesiones a nivel de los
dos ellos se cartacterizan por la presencia de bandas tejidos. La importancia del portador es epidemiológi­
desplazadas y emparejadas con hexoquinasa o por ca, por cuanto elimina quistes en sus deposiciones
una banda J3 fosfoglucornutasa sin banda de a. y así puede transmitir la infección.
en la muscular, produciendo una lesión típica en Ion. En ocasiones, las amibas pueden penetrar la fosfoglucornutasa acompañante o por ambas. Aun­ Durante un seguimiento de 15 pacientes positi­
forma de botella o en bou/011 de chemisse. serosa y producir una perforación con peritonitis, que se ha descrito el paso de zimodemas patógenos vos, sin tratamiento, ninguno desarrolló síntomas de
En estas lesiones (Figura 8-4) hay escasa reac­ cuadro de extrema gravedad, a veces fatal; o bien y no patógenos, y viceversa, los zimodernas al pare­ amibiasis invasora y todos erradicaron el parásito
ción inflamatoria aguda y la mucosa entre las úlce­ por vía sanguínea pueden llegar a otros órganos cer son marcadores estables de virulencia. dentro de 18 meses. Sin embargo, como en ocasiones
ras es normal. Los sitios comprometidos, en orden provocando la arnibiasis secundaria o extraintesti­
i
Las amibas que pertenecen a zimodemas no pa­ aparece invasión, está justificado tratar a todos los
de frecuencia, son el ciego, colon ascendente, recto­ nal . tógenos rara vez son responsables de invasión per­ eliminadores de quistes.
sigmoides y apéndice. El ileon terminal se afecta Las complicaciones de la arnibiasis intestinal sistente y destrucción tisular. En cambio, la presen­ No se sabe si estos pacientes están infectados por
1:
1
rara vez. son la perforación, la hemorragia y el arneboma cia de anticuerpos humorales específicos en los por­ cepas no patógenas, incapaces de producir daño (y
Cuando las lesiones profundas de la submucosa (Figura 8-5). El compromiso de vasos sanguíneos tadores de zimodemas patógenos, sugieren que la por lo tanto enfermedad) o si en algún momento esta 1

se unen con otras zonas,:vecinas, se produce _la des­ en la base de la úlcera puede provocar hemorragia. invasión tisúlár por estas cepas es un hecho fre­ cepa, por circunstancias que se desconocen, se trans­
trucción de una parte importante de la mucosa, El compromiso de la musculatura, por razones des­ cuente. forma en patógena y el portador pasa a enfermo. O
observándose lesiones ulceradas extensas en el co- conocidas, conduce en ocasiones a la fonnación de El mecanismo patogénico de la invasión celular bien el paciente puede estar infectado por cepas
;,,
::i.
.,

124 PARASITOLOGIA MEDICA AMIB/ASIS 125

patógenas y por algún motivo desconocido el hospe­ di�rrea 1:1ás o menos intensa, no disentérica, aguda y antiácidos, pues estos fármacos pueden interferir Reaciones serológicas. Las reacciones de hema­
dero no se ha enfermado aún, pero está en riesgo de o mterm1tente, con o sin dolor abdominal. en el reconocimiento de las amibas. Por esta misma glutinación indirecta y la inmunoabsorción por en­
que ello ocurra. causa, .las técnicas radiológicas con sulfato de bario zimas parecen ser las más sensibles. También son
Los portadores asintomáticos pueden estar in­ 1:ifl�apendicitis. �i las lesiones afectan al ciego deben ser posteriores al examen. muy fidedignas la inmunofluorescencia indirecta, la
fectados tanto por cepas patógenas como no patóge­ y apend1ce, pueden simular una apendicitis aguda. Actualmente se pueden cultivar deposiciones al inmunoelectroforesis y la difusión en gel de agar. El
nas. Esto se puede saber por medio de reacciones La presencia de diarrea debe sugerir la sospecha fresco en medios especiales para observar trofozoí­ promedio de tiempo para la positividad es de 2 a 3
serológicas, las que son positivas sólo en el primer diagnóstica. tos, pero estos cultivos no son practicables en la semanas, son específicas y dan una sensibilidad que
caso. En Chile los portadores sanos representan cer: Forma crónica. Se ha descrito una forma no mayoría de los laboratorios. Existen además, algu­ alcanza entre el 92 y 98%, al utilizar antígenos pu­
ca del 95% de los casos de infección. disentérica, con cuadro de diarrea y dolor abdomi­ nas técnicas no microscópicas de identificación rá­ rificados.
nal, de semanas o meses de evolución, que alterna pida de E. histolytica, como la inmunofluorescencia La presencia de serología positiva a titulas sig­
Amibiasis intestinal sintomática con períodos de constipación. Sobre esta forma cró­ y la inmunoabsorción por enzimas, para detectar nificativos existe en la mayoría de las amibiasis agu­
nica se podría insertar una forma aguda de diarrea o antígenos fecales de trofozoítos y también se han das y así permite la diferenciación con otros tipos de
El tipo y severidad de la enfermedad en pacien­ disentería. usado sondas de hibridación del ADN para identifi­ enfermedad inflamatoria intestinal. Sin embargo, en
tes sintomáticos varia con la localización y exten­ En un estudio reciente, no se demostró diferen­ car secuencias de nucleótidos de los parásitos. La zonas endémicas, la existencia de titulas de anti­
sión del compromiso intestinal. cias entre una población asintomática digestiva y otra cuerpos durante meses o años después de la cura­
preparación comercial de los reactivos supondría
con los síntomas señalados, respecto a la proporción ción completa, hace que la serología tenga a veces
una alternativa útil de diagnóstico.
Rectosigmoiditis aguda. La presencia de lesio­ de E. histolytica en deposiciones, evidencia serológica más valor para excluir el diagnóstico que para con­
nes ulceronecróticas en este segmento colónico se de infección y anormalidades inespecíficas a la firmarlo. Muchos portadores asintomáticos de quis­
Sigmoidoscopia. Es de ayuda en algunos pa­
manifiesta por un cuadro de comienzo agudo con colonos �?pía e histologia. Además, en el grupo tes tienen títulos bajos o negativos.
_ cientes con amibiasis aguda, porque el compromiso El diagnóstico diferencial más importante reside
diarrea disentérica, deposiciones sanguinolentas y asmtomatico, no hubo diferencias entre aquéllos con
presencia o ausencia de quistes de E. histolytica en los rectal es menos frecuente que el compromiso del en distinguir una amibiasis aguda de una colitis
con mucosidades, de alta frecuencia, alrededor de 7 ciego. El examen debe ser realizado inicialmente sin
mismos parámetros, como tampoco presentaron dife­ ulcerosa o enfermedad de Crohn del colon. Además
a 1O evacuaciones al día, acompañada de dolor en previa preparación intestinal y antes de la terapia. Se
rencias en la respuesta al metronidazol. Este estudio pueden coexistir colitis ulcerosa y amibiasis entre el
hemiabdomen inferior o en fosa ilíaca izquierda. El observan las úlceras características, crateriformes, 1 y 4%. La diferenciación es fundamental, puesto
sugiere que los síntomas intestinales crónicos no tie­
tenesmo se da cuando hay compromiso rectal. Pue­ nen asociación con infección amibiana presente o pequeñas, planas, superficiales, con bordes indeter­ que el uso de corticoides en amibiasis, puede produ­
de acompañarse de fiebre, a veces alta, y compromi­ previa y que son indistinguibles del síndrome de in­ minados y frecuentemente cubiertas por una colec­ cir una diseminación del parásito y aun causar la
so del estado general. Alrededor del 2 al 5% de las testino irritable, al cual pueden corresponder. ción de exudado blanco-amarillento. La mucosa entre muerte. Otros diagnósticos diferenciales de impor­
amibiasis intestinales con repercusión clínica, pre­ las lesiones es normal en contraste con los pacientes tancia son la colitis isquémica, la tuberculosis y·el
sentan disentería amibiana. DIAGNOSTICO con colitis ulcerosa y disentería bacteriana. carcinoma en el caso del ameboma.
En ocasiones, se presentan brotes epidémicos de Los trofozoítos de E. histolytica pueden ser ob­
disentería amibiana transmitidos por agua contami­
nada, o bien., la amebiasis puede ocurrir espontánea­ . El diagnóstico de la amibiasis intestinal es muy tenidos de muestras de la base de las úlceras, por
importante, ya que la terapia es altamente efectiva. cepilÍado o aspiración, con bajo rendimiento. Cris­ ABSCESO HEPATICO AMIBIANO
mente en individuos debilitados o inmunodeprími­ Además, ep los casos agudos es necesario distin­ tales de Charcot Leyden también pueden ser vistos
dos. Puede ser precipitada por el embarazo y los gu irla de otras enfermedades inflamatorias intesti­ en este exudado, los que se forman de eosinófilos La patogenicidad de las amibas no sólo está limi- ··
corticoides. nales, como la colitis ulcerosa o colitis por enferme­ lada al tracto intestinal, sino que otros sitios anató­
desintegrados.
dad de Crohn, porque los corticoides son prescritos micos pueden ser afectados y es el hígado el órgano
Las biopsias rectales pueden ser útiles si se
Colitis fulminante. Hay extensa destrucción de en el último y éstos pueden ser letales en pacientes extraintestinal más comúnmente comprometido, sien­
indentifican trofozoítos; sin embargo, éstos no son do el absceso hepático la complicación principal
la mucosa y submucosa del colon, con úlceras en con amibiasis invasora aguda. visibles en el 50% o más de los casos. El cuadro
todo su trayecto. El cuadro es grave, con sindrome (Figura 8-5)_,,,
histológico puede semejar otro tipo de colitis. Es
disentérico, dolor abdominal y severo compromiso Examen parasitológico de deposiciones. El exa­
importante asociar estos hallazgos con las técnicas Epidemiología
del estado general. El hígado puede estar sensible. �en microscópico en muestras repetidas de deposi­ de diagnóstico serológico que son de valor significa­
Si el cuadro no es tratado precozmente, puede desa­ c10nes al fresco, revela trofozoítos y establece el Esta entidad es bien conocida y es frecuente en
diagnóstico en el 90% de las amibiasis sintomáticas. tivo en la amibiasis invasora.
rrollar dilatación importante del intestino grueso, muchos países del mundo, variando su incidencia
similar al megacolon tóxico de la colitis ulcerosa El hallazgo de trofozoítos con glóbulos rojos fago­
citados indica invasión de la pared intestinal y con­ Colonoscopia. Tiene la ventaja de permitir la de acuerdo al tipo de población y localización geo­
idiopática, acompañándose de fiebre elevada, rápida gráfica. Es mayor en países tropicales y en áreas
deshidratación, vómitos y tendencia al shock. Una firma una amibiasis aguda invasora. En el reconoci­ observación de todo el trayecto colónico.
miento del trofozoíto es importante su movilidad con deficiente condiciones sanitarias que favore­
de las complicaciones más comunes y graves de esta cen, primero, una alta incidencia de infección in­
forma fulminante es la perforación, que lleva a ?ireccion�_Y sus seudopodios. En preparaciones fi­ Estudio radiológico o enema baritada. Los ha­
J adas y terudas se reconocen las características nu­ llazgos radiológicos son variados e inespecíficos. testinal. Sin embargo, menos del 1% de pacientes
peritonitis, sepsis, shock y muerte. En algunas áreas con amibiasis del intestino desarrollan abceso he­
del mundo, la tasa de mortalidad de la colitis alcanza cleares y es necesario experiencia para distinguir E. Los cambios de la mucosa pueden ir desde un
histolytica de otras amibas (E. hartmanni, E. coli, granulado fino e irregularidades hasta ulceraciones, pático. En Nigeria el 0,25% de las amibiasis clíni­
a 3% y la perforación ocurre en casi 30% de esas cas se complican con amibiasis hepática y en Méxi­
muertes. Otras complicaciones incluyen la hemorra­ Endolimax nana e lodomoeba bz1tsc/1li ). seudopólipos e imagen en empedrado. Hay dismi­
Las preparaciones fijadas y teñidas se pueden co, alrededor del 1%.
gia masiva, que es rara, y el ameboma que puede nución o pérdida de las haustras. Es útil para pesqui­
procesar según distintos métodos: PVA, PAF, de En países desarrollados, con altos índices de mi­
llevar a obstrucción o intusucepción. sar la presencia de estenosis, perforación, fistulas y
- mayor rendimiento para la búsqueda de trofozoítos graciones desde países en desarrollo o de retomados
I°:":·::-=.:. .:<'.

Forma diarreica o diarrea aguda. En este caso


y método de Telemann (Véase Diagnóstico de labo­
abscesos pericólicos. En el ameboma aparece una
masa que puede ser dificil de distinguir de una neo­ militares desde el trópico, se puede encontrar una
ratorio). Si es posible, las heces deben examinarse elevada incidencia de absceso amibiano.
el compromiso es superficial y se manifiesta con plasia.
antes de administrar antimicrobianos, antidiarreicos
i
1.

PARAS!TOLOGIA MEDICA AMIBIASIS 127

do, hecho que fue demostrado en un estudio en 145 hace hacia el pericardio provoca pericarditis y ha­ es raro y en este caso, las amibas llegan por vía
pacientes con amibiasis aguda o reciente, en los cia el peritoneo causa peritonitis, con una alta mor­ hematógena.
cuales no se encontró hepatitis amibiana. talidad.
La biopsia hepática describe inflamación peripor­ La ámibiasis pleuropulrnonar derecha ocurre por TRATAMIENTO DE LA AMIBIASIS
tal inespecífica y ausencia de amibas dentro de las extensión directa en el 10% a· 20%. Los trofozoítos
zonas de inflamación. Estos hallazgos unido a la pueden extenderse a otros órganos por vía sanguí­ El objetivo de la terapia antiamibiana es erradi­
nea, como el cerebro. car los parásitos en su localización intestinal y extra­
rareza con que este sindrome es seguido de absceso
intestinal. Los fármacos disponibles pueden actuar
y a la desaparición de los sintomas con el tratamiento
en diferentes sitios, en el lumen, en la pared intesti­
con amibicidas intralurninales, corroboran la inexis­ · DIAGNOSTICO : 1
nal o en fonna sistémica.
tencia de una hepatitis propiamente tal. Los hechos
El metronidazol es considerado por muchos como
patológicos más importantes en el absceso amibiano Las pruebas serológicas son positivas en más
del 90% de los casos, en especial la hemaglutinación la droga de elección, tanto para la amibiasis invasora
son la hepatomegalia con una lesión focal que con­
indirecta (HAI). Otras pruebas también son útiles, como para la amibiasis lurninal, sin embargo, es menos
siste en una cavidad abscedada que puede ocupar
como ELISA y CIE. La PCR (reacción de polimerasa efectiva contra los parásitos del Jumen intestinal. Su
incluso la totalidad del lóbulo derecho, con un ma­
Figura 8-5. Absceso hepático amibiano con corte sagital. en cadena) es un método muy sensible y seguro eficacia contra los trofozoítos, en cualquiera ubica­
terial en su interior que es típicamente café, inodoro
Cortesía del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica). ción, es alta. Tiene baja toxicidad, aunque se ha
y espeso, por lo que a menudo se le describe con para el diagnóstico de absceso amibiano, ya que
demostrado un efecto teratogénico en animales, por
aspecto de chocolate líquido o "pasta de anchoas ", permite la detección de ADN de E. histolytica
lo que su uso está contraindicado en mujeres emba­
y que corresponde a tejido hepático necrosado con patógena.
Por razones desconocidas, los hombres son más razadas, en especial durante el primer trimestre. Tie­
sangre. Por lo general, las amibas se encuentran por La punción del absceso con aguja bajo guía
afectados que las mujeres entre 3 y I O veces, aun ne una acción similar al disulfiram, debiendo prohi­
fuera de la lesión necrótica y microscópicamente ecográfica o por tomografía, es importante para ob­
birse el alcohol mientras se administra. En la amibiasis
cuando la incidencia de amibiasis intestinal es igual pueden ser vistas limitadas a la pared externa del tener las características de su contenido y examinar­
intestinal la dosis indicada es 750 mg tres veces al
en ambos sexos. Respecto de la edad, la mayor inci­ absceso, cuando ellas invaden el parénquima circun­ lo microscópicamente, en busca de trofozoítos de E.
día, durante 7 a I O días. Puede asociarse con otro
dencia se presenta en la tercera y quinta décadas de dante. histolytica, lo que rara vez se obtiene. La biopsia de
la vida. Hay diferentes opiniones respecto a la sus­ fánnaco con acción sobre las formas luminales, como
En forma ocasional, el absceso amibiano, se in­ los bordes del absceso puede permitir la visualiza­
ceptibilidad racial. es el furoato de diloxamida o la diyq'dohi-
fecta secundariamente con bacterias, por lo que su ción del parásito, pero esta técnica ha perdido impor­
El absceso hepático amibiano, si bien raro, ha droxiquinolina. ./
contenido llega a ser más fluido, de color amarillo o tancia por la disponibilidad de pruebas serológicas El tratamiento médico exclusivo es exitoso en la
sido reportado en hombres homosexuales con colitis verde, con presencia d� leucocitos polimorfo­ para confirmar el diagnóstico etiológico. La ventaja
amibiana adquirida sexualmente. mayoría de los pacientes con absceso hepático, en
nucleares y bacterias en su interior. de la aspiración o del drenaje reside en la detección especial en aquellos de tamaño pequeño y sin riesgo
de infección bacteriana superpuesta y, posiblemen­
PATOLOGIA de ruptura. En estos casos, también se prefiere el uso
SINTOMATOLOGIA te, para prevenir la ruptura de un absceso grande; sin
de metronidazol en dosis similares de 750 mg tres
embargo, hay controversia respecto a su uso siste­ . veces al día durante 1O días, ya sea por vía oral o
El compromiso hepático ocurre por la migración El absceso amibiano se presenta de muy varia­ mático en todos los casos. Está claramente indicada
de los trofozoítos de E. histolytica desde el intestino parenteral cuando la gravedad del paciente lo amerite.
das fonnas, A menudo no existe una historia previa frente a la inminencia de ruptura y frente a la falta de Frente a la inminencia de ruptura del absceso y a
al hígado vía circulación portal, hecho que ocurriría de amibiasis intestinal o diarrea y sólo una tercera respuesta al tratamiento, con fines tanto diagnósti­ ausencia de mejoría pasadas la 72 horas de trata­
en todo paciente con amibiasis intestinal invasora. parte de los pacientes tiene E. histolytica en sus cos como terapéuticos.
miento con amibicidas, debe efectuarse la aspira­
Sin embargo, no se ha logrado documentar siempre deposiciones al momento del diagnóstico del abs­
el compromiso hepático en relación a la infección ción, útil para fines diagnósticos y terapéuticos. En
ceso. Es una complicación más frecuente de la in­ PRONOSTICO general se logra un adecuado drenaje sólo con aguja
intestinal. Los factores predisponentes de esta inva­ fección asintomática del colon que de la enferme­ y en forma excepcional se requiere un catéter de i
sión y extensión de la infección son desconocidos, dad intestinal. La amibiasis hepática todavía se acompaña de
lo mismo que los mecanismos patogénicos para la drenaje percutáneo. La cirugía debe reservarse para
El cuadro clínico se inicia en fonna lenta e insi­ una mortalidad considerable. Se ha encontrado como casos de ruptura, ya sea a nivel intestinal o hepático,
formación del absceso. diosa, aunque a veces es de comienzo rápido. Los factores de riesgo de mortalidad, el volumen de la
La localización más frecuente es el lóbulo dere­ siempre con terapia antiamibiana asociada. La mor­
síntomas más destacados son el dolor en cuadrante cavidad del absceso, la hipoalbuminemia, la hiperbi­
cho (90%), lo que se explica por la distribución de las talidad en casos de peritonitis amibiana es alta, sobre
superior derecho, fiebre en grado variable y com­ lirrubinemia y la presencia de encefalopatía.
lesiones intestinales que son más frecuentes en la e150%.
promiso del estado general. El dolor puede ser sor­ Entre los amibicidas intraluminales, el furoato de
región cecoáscendente (75%) y por la distribución do y constante o agudo y punzante, que se acentúa
de la circulación que irriga esa zona y drena a la vena con la tos y la respiración. La irradiación a hombro OTRASLESIONESEXTRAINTESTINALES diloxanida es uno de los más eficaces y mejor tole­
porta. Por lo general, el absceso es único, pero no es rados, pero sólo está disponible en USA. Su princi­
derecho significa compromiso diafragmático. La
raro la fonnación de abscesos múltiples. La extensión de un absceso hepático hasta el pal efecto colateral es la flatulencia. Se usa en dosis
ictericia es rara, está presente sólo en casos avan­
Es controversia! si existe una fase de hepatitis pericardio es la complicación más peligrosa. La de 500 mg tres veces al día durante I O días.
zados y complicados. Al examen físico destaca la La diyodohidroxiquinolina es eficaz en el 60-70%
amibiana previa a la fonnación del absceso. Algunos hepatomegalia sensible y el diafragma derecho pue­ peritonitis se produce por perforación de una úlce­
observadores consideran la existencia de una infla­ ra del colon o por rotura de un absceso. Son raras de los casos, se utiliza en dosis de 650 mg tres veces
de aparecer elevado a la percusión. El absceso pue­
mación aguda, el dolor en cuadrante superior dere­ las úlceras o lesiones de los genitales, piel perianal al día durante 20 dias. Se han reportado algunos
de complicarse con sobreinfección bacteriana y su
cho y/o el crecimiento del hígado durante el curso de o pared abdominal (fistulas), las que suelen ser casos de atrofia óptica y está contraindicado en
crecimiento progresivo lleva a la complicación más
una amibiasis intestinal aguda, pero esta sintoma­ consecuencia de extensión directa de la enfenne­ enfermos con tiroidopatias.
séría, cual es la ruptura hacia estructuras a�ya<:en­
tología representaría una reacción inespecífica más dad intestinal; se piensa que algunas se deben a Existen otros amibicidas de acción tisular dispo­ :,¡
tes. Si la ruptura se produce hada el diafragma y
que una diseminación difusa del parásito en el higa- transmisión sexual. El absceso cerebral metastásico nibles y que pueden usarse como alternativa al
cavidad pleural ocasiona empiemas y fistulas; si lo
l28 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 9

metronidazol. Entre ellos se cuenta con la paro­


momicina, cloroquina, emetina y dehidroemetina:
BIBLIOGRAFIA BALANTIDIOSIS
Paromomicina es un antibiótico aminoglicósido, Anand AC,Reddy PS, Saiprasad GS, K.her SK. Does non­ CESAR NAQUIRA
útil en la amibiasis crónica y en la amibiasis aguda dysenteric intestinal amoebiasis exist? Lance! 1997;
leve como droga única. Tiene baja toxicidad y actúa 349 (9045):89-92.
directamente sobre las amibas en dosis de 500 mg Carrero JC, Laclette JP. Molecular biology ofEntamoeba
tres veces al día durante 7 días. Jzisto/ytica: a review. Arch Med Res 1996; 27(3):403-
El fosfato de cloroquina tiene utilidad en el abs• 12.
ceso hepático por su elevada concentración en el Diamond LS, Clark CG. A redescription of Entamoeba
hígado. La dosis indicada es Igr al día durante 2 histolytica Schaudinn, 1903 (Emended Walker, 1911) Definición. Balantidiosis es una zoonosis causa­ El quiste tiene fonna redondeada y mide de 40 a
días y luego 500 mg al día durante 4 semanas. separating it from Entamoeba dispar Brumpt, 1925, J da por Ba/antidium coli, protozoo ciliado del intes­ 60 µm de diámetro, está cubierto por una membra­
Puede asociarse a metronidazol. Eukaryot Microbio! 1993; 40(3):340-4. tino grueso del cerdo, reservorio de la infección. La na quística y contiene sólo un parásito, que se le
Emetina es un alcaloide derivado de la ipeca.. Lee KC, Yamazaki O, Hamba H. Analysis of 69 patients infección humana es rara y se caracteriza por lesio­ puede distinguir, en las preparaciones en fresco,
Administrada por vía subcutánea es un agente with amebic liver abscess. J Gastroenterol 1996; nes intestinales y sintomatología similar a la con sus cilios y núcleos en el interior.
amibicida efectivo en colitis severas y abscesos he­ 31(1):40-5. amibiasis intestinal. Los trofozoítos y quistes salen con las heces del
páticos. Es relativamente tóxica, con múltiples efec­ Mirelman D, Moody- Haupt S, Becker S, Nuchamowitz cerdo al medio ambiente (Figura 9-2). Los trofozoí­
tos adversos: vómitos, diarrea, dolor cólico abdomi­ Y, BrachaR, AlonR. Cell surface molecules ofpatho­ Biología tos suelen persistir algún tiempo y luego perecen por
nal, dolor muscular, taquicardia, hipotensión, dolor genic and nonpathogenic Entamoeba /zistolytica and desecación, no así los quistes. Los quistes deben ser
precordial y alteraciones electrocardiográficas. La their relation to virulence. Adv Exp Med Biol 1996; Balantidium coli tiene por hábitat habitual el in­ ingeridos por los cerdos para mantener la infección
dosis es I mg/kg/día (máximo 60 mg), durante 5 408:225-7. testino grueso del cerdo y presenta dos formas evo­ en la naturaleza. El hombre, principalmente el que
días. Debe usarse con precaución con monitoreo Petri Wa Jr. Amebiasis and the Entamoeba /zistolytica lutivas, el trofozoíto y el quiste. está en contacto directo con la crianza y/o comer­
cardiológico constante. Gal/ GalNAc lectin: from lab bench to bedside. J El trofozoíto es ovalado y mide de 50 a más de cialización del cerdo, está propenso a ingerir ali­
Dehidroemetina es una droga análoga a la ante­ lnvestig Med 1996; 44(2):24-36. 150 µm de longitud por 40 a 70 µm de diámetro mentos contaminados con heces de cerdo contenien­
rior, que mantiene la eficacia pero es menos tóxica. Saavedra Lira E, Pérez Montfort R. Energy production in (Figura 9-IA). Es el más grande de los protozoos do los quistes o éstos pueden ser vehiculizados por
La dosis es similar a la de emetina. Entamoeba histo�vtica: new perspectives in rational intestinales. La porción anterior suele ser más ancha el agua, viento o vectores mecánicos hasta el alimen­
drug design. Arch Med Res 1996; 27(3):257-64. y presenta una hendidura, el citostoma o punto de to del hombre.
PREVENCION Sharrna MP, Dasarathy S, Verrna N. Prognostic markers entrada de su alimento. El cuerpo está cubierto de Los quistes al ingresar al tubo digestivo del ani­
in amebic liver abscess: a prospective study. Am J prolongaciones pequeñas o cilios dispuestos, unifor­ mal u hombre van a sufrir la acción de los jugos
Las medidas preventivas a nivel individual per­ Gastroenterol 1996; 91(12):2584-8. memente, en hileras; los más grandes se encuentran digestivos del estómago e intestino delgado, lo que
siguen evitar el consumo de agua y alimentos con­ Stanley SL. Protozoa amebiasis, Gastroenterol Clin North alrededor del citostoma. En preparaciones frescas, permite la digestión de la cubierta del quiste y la
taminados y el uso de hábitos de higiene personal Am 1996; 25(3):471-92. se le observa de color grisáceo, con movimientos liberación del trofozoíto, el cual, en el intestino grue­
estrictos. A nivel general, el adecuado saneamiento activos de los cilios que lo trasladan rápidamente de so, si las condiciones son favorables, comenzará a
ambiental y la educación para la salud contribuyen un segmento a otro del campo microscópico. Por reproducirse.
a disminuir en forma importante esta infección. transparencia, se puede apreciar la presencia de va­
Se recomienda, en algunos casos, el tratamiento cuolas con elementos nutritivos o de desecho y una Epidemiología
de los contactos sexuales. de ellas, la vacuola contráctil, situada hacia la por­
ción posterior. En la terminación posterior suele La forma infectante para el hombre es el quiste.
observarse una abertura o ano llamada citopigio. En La puerta de entrada es la vía oral y el mecanismo de
las preparaciones coloreadas se puede distinguir dos transmisión es la contaminación del agua y alimento
núcleos situados en la porción media del parásito, el con los quistes. Aparte del cerdo, se han encontrado
macronúcleo de forma arriñonada y el 111icro11zícleo otros animales naturalmente infectados como el mo­
de forma redondeada, ubicado en la concavidad del no y experimentalmente, otros mamíferos.
macronúcleo. En el cerdo se ha descrito Balantidium suis mor­
Los trofozoítos se multiplican por fisión binaria, fológicamente indistinguible del B. co/i y aún hay
j:. pero en ocasiones se suele observar el fenómeno de opiniones sobre si se trata de la misma especie, razas

�¡
la conjugación, mediante la cual dos trofozoítos se o cepas de una sola especie. Los métodos de biolo­
fusionan, intercambian material cromosómico de sus gía molecular probablemente aclaren genéticamente
respectivos núcleos y luego se separan, por lo cual se esta situación.
"i considera que se trataría de una fonna de reproduc­ En el antecedente epidemiológico de las perso­
: ción sexual, a pesar que no ha habido multiplicación nas parasitadas, se encuentran datos de contacto
del parásito (véase Figura. l-1). Los trofozoítos se directo o indirecto con cerdos. En áreas de crianza
alimentan de las substancias nutritivas que encuen­ libre de cerdos, como ocurre en los villorios de las
tra en el intestino principalmente carbohidratos, los zonas rurales, los quistes que contaminan el suelo
que metaboliza anaeróbicamente para obtener su pueden ser v.ehiculizados por el agua, el viento y los
energía. Cuando las condiciones de su hábitat no le vectores meéá'nicos como las moscas y cucarachas,
son favorables, se enquista. hasta el alimento humano. En zonas endémicas, el

1), '.i,
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PARASlTOLOGlA MED[C,J BALANTIDIOSlS 131
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Intestino grueso

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( CERDO /HOMBRE
FECALISMO
desintegración
AMBIENTE

Figura 9-2. Ciclo evolutivo del Ba/a111idiu111 coli.

hombre parasitado con malos hábitos higiénicos se más afectado. Las úlceras son pequeñas, de bordes
convierte en el principal difusor de la infección. edematosos en cuyo fondo se observa tejido necró- ·
Similarmente a lo manifestado en otros parasi­ tico. En el corte histológico puede reconocerse; fá­
tismos intestinales, la falta de educación sanitaria, cilmente, a los parásitos por su tamaño (Figura 9-
en este caso, en relación a la crianza higiénica del 1 ), los cuales se observan atravesando la muscularis
cerdo, la ausencia de letrinas en zonas rurales y la de la mucosa, alcanzando la submucosa y a _veces,
pobreza, son factores condicionantes en la epide­
miología de estas parasitosis.

Patología TABLA 9-1


DIFERENCIAS EN LA PATOLOGIA
Balantidium co/i no causa lesiones en el intesti­
no grueso del cerdo, pero en el hombre puede pro­ DE LA AMIBIASIS Y BALANTIDIOSIS*
ducir ulceraciones similares a las ocasionadas por
Amibiasis Bala11tidiósis
Entamoeba histolytica, con cuya etiología hay que
diferenciarlas (Tabla 9-1), así como de las ulcera­
Ulceras intestinales cuello angosto cuello ancho
ciones bacterianas. Las lesiones son favorecidas por
la presencia de lesiones prevías del intestino, oca­ Hemorragias + +++
sionadas por diversas etiologías, tipo de alimenta­ Perforación intestinal ++ +
ción rica en carbohidratos, flora bacteriana favora­ Apendicitis + ++
ble, etcétera. i¡
Invasión vascular ++ ++
Las lesiones ulcerativas pueden extenderse a lo
largo del intestino grueso, desde el ciego hasta el Lesión hepática ++
Figura 9-1. Balantidiosis. (A) Trofozoitos de Ba/a11tidi11111 co/i en microscopio de contraste de fase. (B), (C) y (D) recto (Figura 9-3). El rectosigmoides suele ser el •según A. Atías
Balantidiosis intestinal: aspecto histológico aumento menor, mediano y mayor.
13J PARASITOLOGIA MEDICA BALANTIDIOSIS 133

Sintomatología ne de manos antes de ingerir los alimentos y luego Hernández F, Rivera P. Balantidiasis: recopilación de
de defecar, lo cual se realiza en forma limitada en conceptos. Rev Costarric Cienc Med 1991; 12:67-75._
Las formas clínicas de presentación de la balan­ las áreas endémicas. Hernández F, Arguello AP, Rivera P, Jiménez E. Balan­
tidiosis son: la balantidiosis aguda o disentería ba­ Más importante es la profilaxis colectiva dirigi­ tidi11m co/i (Vestibuliferida: Balantidiidae): the per­
lantidiana, la balantidiosis crónica y la balantidiosis da a la crianza higiénica del cerdo, al mejoramiento sistence of an old problem. Rev Biol Trap 1993; 41:
asintomática (portadores). del saneamiento ambiental incluyendo agua pota­ 149-51.
La disentería balantidiana se caracteriza por un ble, sistema de eliminación de excretas o letrinas y Santibáñez J, Vásquez V, Muñoz P, Cárdenas z. Estudio
cuadrp agudo de diarrea con mucosidad, sangre, pujo educación de buenos hábitos higiénicos en la ali­ epidemiológico y coproparasitológico de grupos fami­
y tenesmo que semeja a la disentería amibiana o mentación. liares con casos índices de balantidiasis humana en
bacilar. El examen sigmoidoscópico permite obser­ Chiloé. Parasitol al Día 1985.
var las úlceras, y la toma de muestras de las lesiones BIBLIOGRAFIA Vásquez V, Muñoz.P, Santibáñez J. Balantidiasis huma­
posibilita examinarlas al microscopio y aclarar la na en la isla de Chiloé. Parasitol al Día 1987; 11:151-
etiología balantidiana. La sintornatología digestiva Atias A, Franco C. Un caso fatal de balantidiasis. Parasitol 54.
se acompaña de manifestaciones generales, princi­ al Día 1991; 15:114-6. Yang Y, Zeng L, Li M, Zhou J. Diarrhoea in piglets and
palmente fiebre, malestar general, deshidratación, Cooper PJ, Guderian RH. Gastrointestinal illness asso­ monkeys experimentally infected with Ba/antidi11m
dolor abdominal y postración. ciated with Ba/antidium coli infection in rural com­ coli isolated from human faeces. J Trap Med Hyg
La balantidiosis crónica se presenta con sintorna­ munities in Ecuador. Parasitol al Día 1994; 18:51-4. 1995; 98:69-72.
Figura 9-3. Colon con úlceras de diverso aspecto y tama­ tología digestiva variada, pues en ocasiones o espo­
ño, con extensas áreas de mucosa esfacelada (caso del Dr. rádicamente, hay diarrea con o sin moco y sangre,
A. Alias, Chile). dolor abdominal, malestar general o sólo molestias
digestivas vagas de dolor abdominal, náuseas, vómi­
tos, etcétera.
el interior de vasos sanguíneos (Figura 9-4) pueden Algunos infectados no presentan sintomatología
en ocasiones atravesar toda la pared intestinal, pro­ evidente siendo portadores del parásito y, en mu­
duciendo perforación y peritonitis. Alrededor de los chos casos, importantes reservorios y difusores de la
parásitos, se observan lesiones necróticas con esca­ infección humana.
sa infiltración celular de neutrófilos, linfocitos y
eosinófilos. Se ha descrito la presencia de los pará­ Diagnóstico
sitos en los ganglios mesentéricos, pero una locali­
zación extraintestinal por migración, parece no El diagnóstico clínico se plantea generalmente en
eidstir. las formas agudas o de disentería, donde la diferen­
ciación con amibiasis debe establecerse desde el
inicio, ya que la forma de balantidiosis crónica pre­
senta sintornatología variada.
El diagnóstico de laboratorio se hace por el exa­
men de las heces en busca del parásito. En las heces
líquidas, diarreicas, disentéricas o fo¡-madas, la pre­
sencia del trofozoíto de B. coli puede detectarse en
el examen directo de las heces. En las formas cróni­
cas, el hallazgo de los quistes mediante los métodos
de concentración, establece el diagnóstico. Son de
ayuda para la búsqueda del parásito, el método de
Baermann que permite encentrar los trofozoítos, así
como el cultivo en medios similares a los usados
para E. histolytica.

Tratamiento

El parásito es sensible a las tetraciclinas, a la ! •


paramornicina y los derivados nitroimidazólicos. Para
dosis y presentación, ver las Tablas Terapeúticas.

Control
Figura 9-4. Corte histológico de intestino grueso, en el
cual se observa un vaso de la submucosa con numerosos La profilaxis individual se basa en la ingesta de
trofozoitos de Bala11tidi11111 coli. alimentos bien lavados o cocidos; así corno la higie-

.,. •
i
1
Capítulo 10 GIARDIAS/S 135

GIARDIASIS aparato de Golgi, además de vacuolas periféricas o


vesículas que podrian constituir parte del sistema
lisosomal-endolisosomal de los trofozoitos. Estos
ISABEL NOEMiy ANTONIOATIAS organelós contendrían fosfatasa ácida. El sistema
reticuloendoplásmico fonnaría y transportaría es­
tas enzimas, las que colaborarian en la degradación
de macromoléculas ingeridas· por el parásito y lo­
calizadas en vacuolas periféricas acumuladas por
un proceso de endocitosis.
G. duodena/is posee una gran variedad de endo­
Definición. Infección intestinal causada por un los muy visibles en preparaciones teñidas (Figura
simbiontes, entre los cuales hay que mencionar in­
protozoo flagelado, la Giardia duodena/is, predo­ I 0-2 y Lámina 2). A diversas alturas de la superficie
clusiones de bacterias, micoplasmas y virus. De
minante en los niños e inmunosuprimidos y carac­ celular emergen cuatro pares de flagelos que le dan
éstos, destacan los Giardiavirus que poseen 32nm
terizada por la producción de cuadros agudos y cró­ movilidad. La concavidad que forma su cara ventral,
de ARN de doble hélice, y que se ha identificado en
nicos, de intensidad variable, pudiendo llegar al en sus dos tercios anteriores, constituye una ventosa
numerosos cultivos. Se replicarían por una ARN
síndrome de malabsorción intestinal. En el adulto o disco suctor, el que permite distinguir la G.
polimerasa y se le ha asociado a una disminución
es generalmente asintomática. duodena/is de otros flagelados, compuesto por dos
de la adherencia y reproducción parasitaria. Sin
)

Sinonimia: Giardia /amb/ia, Giardia intestina/is lóbulos unidos a la altura de los núcleos (Figura 10-
embargo, la presencia de este virus no estaría rela­
:!
y Giardia duodena/is. En este texto se empleará esta 3). Este disco tendría capacidad contráctil, y su cionada a la virulencia del protozoo. Aparentemen­
'i:l última denominación, conforme a la nomenclatura citoesqueleto está compuesto de microtúbulos, en te no habría transferencia del genoma de este virus
I, vigente. que destacan dos de las proteínas que lo conforman: al ·del. hospedero.
,,
!i, la tubulina y fundamentalmente, la giardina (beta Durante mucho tiempo se pensó que Giardia te­
Bi!)logía giardina de 29 kDa y alfa giardina 33,8 kDa),.); que
I! le penñitiria al parásito adpsarse al epitelie i!J't'esti;;: · ·
nía estricta especificidad de hospedero; sin embar­
¡',
go, se han descrito un gran número de especies
Giardia duodena/is, es un protozoo flagelado na! del hospedero. Influirian también en su adhesión
l',,i
morfológicamente indiferenciables unas de otras,
de a.specto muy singular a la microscopía de luz: el a la superficie del hospedero, los efectos propulsivos..
salvo empleando técnicas especiales.
trofozoito es piriforme cuando se observa de frente de los flagelos ventrales y las Jectinas que se unirían
!;,¡
1 El hábitat de este protozoo es el intestino delga­
111
y lateralmente, semeja uria coma o vírgula, con una a receptores de los enterocitos: Casi perpendiculares Figura 10-2. Trofozoítos de Giardia d11odenalis. Cultivo do, particulannente su porción proximal; es decir,
cara cóncava y otra convexa. Mide entre 1 O y 20 µm al axostilo, se hallan los cuerpos mediales o para­ teñido con hematoxilina eosina duodeno y segmentos altos del yeyuno. La forma
de largo; por 5 a 15 de ancho y 2 a 4 de espesor. basales cuya función estricta se desconoce, pero pre­ vegetativa o trofozoíto, mediante la cual el parásito
¡¡;
Posee simetría bilateral y su cuerpo aparece dividido sumiblemente tendrían relación con la formación del se reproduce por fisión binaria, se le suele encontrar
!:I
en mitades por un engrosamiento citoplasmático disco suctor y que desaparecerían durante la fisión. en grandes cantidades en la superficie del epitelio
compuesto por microtúbulos, el axostilo, que actúa Los quistes son ovalados y miden de 8-12 y de 7-
ii!
'I' intestinal, generalmente en el tercio basal de las ve-··
como esqueleto axial (Figura I 0-1). 1O µm respectivamente; en observación al fresco
:,! En su extremo anterior presenta dos núcleos rela­ aparecen como cuerpos muy refringentes, con una
llosidades, envueltos en el moco que recubre la •pa­
¡ :1
red. Tanto los trofozoítos como los quistes salen al
tivamente grandes y vesiculares, con sendos nucléo- membrana quística de doble pared (Lámina 3) y, en
,!! su interior, se aprecian cuatro núcleos y una serie de
exterior con las deposiciones del hospedero, pero
mientras la fonna vegetativa es lábil y pronto se des­
filamentos que constituyen los restos flagelares y truye en el medio ambiente, los quistes son más re­
cuerpos parabasales. sistentes y constituyen la forma infectante del pará­
Se han distinguido, de acuerdo a la morfología de sito. Cuando los quistes son ingeridos por el hom­
ciertas estructuras microtubulares denominados cuer­ bre, sus envolturas se disuelven debido a- la acción
pos mediales, tres especies de Giardia: G. agi/is, de los jugos digestivos, dejando en libertad los tro­
descrita en anfibios, G. muris en roedores, aves y fozoítos (Figura 10-4), los cuales se ubican en el duo­
reptiles, y G. duodena/is observada en el hombre, deno y yeyuno, multiplicándose activamente. El des­
mamíferos, aves y reptiles. Las diferencias se basan enquistamiento está adaptado a las condiciones fi­
en las secuencias de los ácidos nucleicos del ADN. siológicas en el estómago e intestino del hombre y
Se ha mencionado alrededor de 40 variedades de de algunos mamíferos. Así, el proceso de desenquis­
este protozoo, basadas en su morfología, transmi­ tamiento se favorece por la exposición a la alta acidez
sión cruzada en forma experimental, crecimiento y gástrica, seguida por la brusca elevación del pH, pro­
desarrollo in vitro, infectividad, virulencia y patoge­
pia del intestiuo delgado. ,i
nicidad, caracteristicas antigénicas, electroforesis de Cuando las condiciones del medio intestinal le
Forma Vegetallva Quiste letranuclear proteínas, enzimas, sitios de restricción, hibridación Figura 10-3. Trofozoítos de Giardia d11ode11alis (micros­
W\.
son adversas, la forma vegetativa se enquista y sale
r / del ADN y cariotipo molecular. Este agente tiene
pocos organelos m1:�J:inm,osos, así carece de mito­
copia electrónica). v = vesículas; n = núcleos; f = flagelos;
m = membrana; na = área desnuda; dsls = disco sector
al exterior con las heces del hospedero. Una vez
allí, los quistes tienen capacidad de infectar por la
Figura 10-1. Esquema del tro'fozoíto y quiste de Giardi� condrias, peroxiso'mas, glicosomas e hidrogeno­ lóbulo superior; dsli = disco sector lóbulo inferior; cm = vía oral a otro mamífero susceptible o de reinfectar
d11odenalis. somas. Sólo existirían evidencias de la existencia del cuerpos mediales; r = ribosomas. al mismo hospedero (Figura I 0-5).
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J36 PARASITOLOG/A MEDICA GIARDIAS/S 137

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Tr.ofozoitos

'"'···¡-···
HOMBRE
FECALISMO
dcsintegrndón
AMBIENTE

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l QIJiStes.

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11
Figura 10-4 = Proceso de desenquistamiento de Giardia. (A) Quiste típico. (B) a (F) Secuencia de la salida del
trofozoíto. (G) El desenquistamiento se ha completado y continúa la división de los trofozoítos hijos. (H) El quiste
Figura 10-5. Ciclo evolutivo de Giardia duode11alis.
1:I·:
vacío. (Gentileza del Dr. Alan K. Bingham, Dept. Microbiology, University of Oregon Health Sciences Center,
Portland, Oregon, Estados Unidos). particular los hábitos de limpieza. Por las caracterís­ sin embargo, estudios.practicados recientemente han
ticas de su difusión, la giardiasis en ocasiones es demostrado que éste no es el único hospedero. Apa­
de tipo familiar, con niños que presentan síntomas rentemente, una gran variedad de mamíferos meno-··
Epidemiología los estratos altos de la población y se incrementan y padres infectados, pero asintomáticos. Si se pro­ res, entre los que destacan el castor, el gato .y el
notoriamente en las guarderías a las que asisten ducen frecuentes reinfecciones en los niños, a pesar perro, han sido infectados con quistes de G. duode-
La giardiasis es una infección cosmopolita y se niños de los estratos poblacionales más desposeí­ de un adecuado tratamiento y de la educación para 11alis de origen humano. Por otra parte, encuestas
halla ampliamente distribuida en todas las latitudes dos. Cada vez existen mayores evidencias que en la salud necesaria, es recomendable investigar la practicadas en Nuevo México y Colorado, en dife­
y continentes, en especial en climas templados y estos recintos existe una transmisión persona a per­ infección en el manipulador de alimentos y en el rentes especies animales, han evidenciado infección
húmedos. sona de la infección. Factores de alto riesgo son resto de los miembros de la familia. La tendencia a espontánea en castores, coyotes, bovinos y perros.
En la población rural de América Latina, calcula­ también la deficiente disposición de excretas y un la alimentación artificial de los lactantes y el des­ Con estos antecedentes cabe afim1ar que, si los es­
da en 108 millones de habitantes carentes de infra­ nivel educacional e intelectual deficiente de la madre. cuido de la higiene en la preparación de biberones, tudios de biología molecular así lo demuestran, la G.
estructura básica y económica, se calcula que unos Como los quistes de la G. duodena/is, constitu­ constituye un factor importante que favorece la dis­ duodena/is del hombre puede infectar a otros anima­
16 millones (15 %), presentan esta infección yen las fom1as infectantes y son eliminados con las persión de esta parasitosis. En países desarrollados, les que actuarían como reservorios de la infección.
protozoaria. Es una parasitosis de clara prevalencia heces, del destino de éstas dependerá el grado de en los cuales el saneamiento ambiental básico ha La existencia de estos reservorios explicaría la pre­
en niños. En algunos hospitales de regiones urbanas, difusión de la protozoosis en la naturaleza. Se ha sido resuelto, una elevada proporción de turistas, sencia de la infección en áreas ubicadas lejos de la
en las cuales no son tan frecuentes las geohelmintiasis, inculpado al agua de bebida de la transmisión de la que han visitado zonas endémicas, al regresar a su actividad del hombre o provocada por medio del
corno Santiago de Chile, giardiasis es, con mucho la infección; el quiste es viable por un período de dos país de origen presentan cuadros diarreicos agudos, agua no contaminada con heces humanas.
enteroparasitosis más frecuente en menores de 12 meses en agua fría y es resistente en agua potable. cuya causa es la G. duodena/is. Los animales a los que se responsabiliza más fre­
años. El 24 % de lactantes y el 55 % de preescolares Las malas condiciones de saneamiento ambiental Otro mecanismo de transmisión, descrito en los cuentemente de infección humana son los castores y
que concurrían a un hospital por trastornos digesti­ (la calidad de medios de eliminación de basuras y Estados Unidos de Norteamérica, es el contacto ano­ los gatos, aunque existen controversias en tal sentí­
vos, están infectados por G. duodena/is. Aún más, excretas, la pululación de moscas, los grados de boca practicado por personas con hábitos homo­ ' do. Es por ello que la giardiasis es considerada por
estudiando la población infantil presuntamente sana, contaminación fecal del agua de bebida y riego, con sexuales. En estos individuos, la giardiasis es signi­ muchos investigadores como una zoonosis.
corno es aquella que asiste a guarderías infantiles, se la subsecuente contaminación de alimentos), cons­ ficativamente superior en relación a la población En suma, los factores epidemiológicos más im­
ha demostrado que la infección por este protozoo _tituyen los principales factores de mantención y general. portantes en la giardiasis son similares a los de la
afecta al 45% de los niños. Estas cifras; sin embargo, ·· . diseminación de la giardiasis. A ellos debe sumarse Hasta hace unos pocoiniñéis, se planteaba que G. amibiasis, salvo la marcada prevalencia de la infec­
·¡
de acuerdo al nivel socioeconómico descienden en el grado de educación sanitaria de la población y en duade11a/is era una infección exclusiva del hombre; ción por G. duodena/is en niños.

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1:38 PARASITOLOGIA MEDICA GIARDIASIS 139

Patología demostrado que los pacientes con grupo sanguíneo tendrían correlación con la resolución de la infec­ camente diferentes podrían inducir diversas moda­
A son más susceptibles a la infección, aunque fre­ ción. Su acción se efectuaría contra una proteína de lidades de presentación clínica.
El daño producido por G. duodena/is es varia­ cuentemente ésta es asintomática; en tanto, aqué­ 30 kD¡¡. del protozoo que inhibiría su adherencia,
ble, oscilando desde los pacientes que presentan llos que tienen el grupo B, son menos susceptibles facilitando su remoción del intestino. A su vez,se ha Sintomatología
alteraciones mínimas de la mucosa intestinal, a a adquirir el parásito. No se halló relación entre la encontrado IgA secretora específica anti-G. duode­
aquéllos que cursan con alteración parcial modera­ susceptibilidad a adquirir el agente y los grupos O y na/is en leche materna de ratas,con efecto protector Se ha postulado que la aparición de síntomas en
da de las vellosidades del intestino delgado. En este AB. Aparentemente existiría una estrecha asocia­ a la infección de las crías. Estos hechos se han la giardiasis depende, por una parte, del número de
último caso, se produce un serio deterioro de la ción entre infección e intensidad de la sintomatología descrito también en el hombre, en que el calostro parásitos y de la calidad antigénica de la cepa para­
absorción con la subsecuente repercusión en el entre los grupos fenotípicos de histocompatibilidad humano contendría lgA secretora específica contra sitaria y, por otra, de factores dependientes del hos­
estado nutritivo. HLA AIO,A l l ,B5,en tanto que los fenotipos HLA este protozoo. pedero, como la acidez gástrica, la motilidad intes­
Pareciera existir una relación directa entre la B7, B17, Bw 14 y Bw40 cursarían con giardiasis En relación a la inmunidad celular,el estado de los tinal y la calidad de la respuesta inmune. Del equili­
magnitud del daño microscópico del intestino y la asintomática. conocimientos es aún insuficiente, pero se piensa brio entre los factores del parásito y del hospedero,
intensidad de la sintomatología. Si la infección es La hipótesis de Veghely de que G. duodena/is al que juega un papel importante, porque en ratas hi­ resultará el mayor o menor daño histológico y, por
asintomática,el daño histológico es mínimo; pero en adosarse a la pared intestinal actuaría como barrera potímicas (nude+/nude+),la infección por G. duode­ consiguiente, la intensidad de la sintomatología.
casos severos con malabsorción, se observa a la mecánica a la absorción,parece poco probable,pues na/is toma un curso extraordinariamente grave con Un número importante de personas infectadas
microscopia óptica, una configuración anormal de para que este hecho tenga traducción clínica, sería tendencia a la reinfección. También se ha observa­ con G. duodena/is no presentan síntomas. Habi­
las vellosidades intestinales y, bajo microscopia necesaria la presencia de millares de trofozoítos do que las células cebadas tendrían un rol en los tualmente, la aparición de éstos ocurre en niños. Se
electrónica, se describen alteraciones del enterocito dispuestos sobre el epitelio intestinal, lo que no mecanismos defensivos contra el parásito, ya que ha precisado que el período prepatente de la
tanto a nivel de las microvellosidades como del ocurre en la práctica. Ciertamente, no es un meca­ en ratas deficientes en células cebadas fY'/f/WfJ de­ giardiasis es de seis a quince días,con un promedio
citoplasma. Las microvellosidades, aparecen acha­ nismo aislado el que explica el daño producido por sarrollan giardiasis crónica. Los leucocitos intra­ de nueve.
tadas, engrosadas, especialmente a distal, o emer­ el parásito, sino la acción conjunta de varios de epiteliales intestinales que se hallan elevados po­ En la Jase aguda es frecuente observar náuseas,
giendo unas de otras. En el citoplasma, se presentan ellos. drían, en los casos de giardiasis, participar en reac­ vómitos,diarrea acuosa,dolor abdominal epigástrico,
alteraciones evidentes que se manifiestan por un Clásicamente, se aceptaba que la G. duodena/is ciones lgA-ADCC contra este protozoo y aunque meteorismo y anorexia marcada. Esta fase dura tres
gran número de vacuolas,traduciendo el daño celu­ no penetraba la barrera epitelial; sin embargo, se este mecanismo defensivo no se ha demostrado para a cuatro días y si no media tratamiento específico, se
lar. El enterocito dañado es eliminado al lumen han encontrado trofozoítos de G. duodena/is en el G. duodena/is, se le ha mencionado como un po­ pasa a la fase crónica de duración variable. En la
intestinal, con lo que se acelera el recambio celular corion de la mucosa del intestino de niños infecta­ tencial protector contra otros enteropatógenos. fase crónica aparece un cuadro diarreico con cuatro
y lá repoblación con células predominantemente dos,a los cuales se les practicó biopsias duodenales. Existen mecanismos defensivos inespecíficos del a cinco evacuaciones diarias,pastosas,de mal olor,
inmaduras desde el punto de vista enzimático y de Este fenómeno ha sido observado en pocas oportu­ hospedero frente al parásito. En este sentido, es en la que se reconocen alimentos ingeridos (liente­
transporte. Estos hechos conducirían a un síndrome nidades, y su importancia está en evaluación. posible que los hospederos resistentes a la infección ría); la anorexia y los dolores abdominales persisten
de malabsorción que afecta a lípidos, hidratos de En el último t1empo se han incrementado los por G. duodena/is tengan en el moco de la pared y se agrega importante baja de peso. Los síntomas
carbono y aminoácidos. Clínicamente, se observa conocimientos de la relación de la respuesta inmune intestinal leucotrienos, factor de necrosis tumoral, remiten y reaparecen en tiempos variables de un
una alteración en las pruebas de absorción intesti­ frente a la infección por G. duodena/is y la calidad proteína básica mayor del eosinófilo e interferón, a individuo a otro. El cuadro puede permanecer así,
nal del caroteno, D-xilosa, vitamina A, vitamina antigénica: de este protozoo. Se sabía que algunas lo que se debe sumar la motilidad intestinal y la por un lapso indefinido, si no media tratamiento ··
B12, ácido fólico y alfaaminonitrógeno, asocián­ personas se infectaban sin llegar a enfermar, en secreción normal de estas mucosas, lo que en con­ específico o remite espontáneamente.
dose además a malabsorción de hierro. El daño del tanto que otras lo hacían de un modo muy severo. junto protegería al hombre de la acción de este En un grupo pequeño de enfermos, masivamente
enterocito explica la disminución de la actividad Más aún, de los pacientes que enfermaban, algunos parásito. infectados por G. duodena/is, se puede desarrollar
triplica, quimiotriptica, lipásica y fosfolipásica en curaban espontáneamente, en tanto que otros ten­ Aunque los diversos mecanismos defensivos del un síndrome de malabsorción intestinal, en que se
pacientes con giardiasis, que mejora después del dían a la cronicidad. El hecho de ser una infección hospedero podrían explicar las diferentes caracterís­ observan evacuaciones frecuentes de heces con ele­
tratamiento específico. En estos pacientes, se ha sintomática en los niños y poco sintomática en los ticas del cuadro clínico,también deben considerarse vado contenido en grasas y progresivo compromiso
descrito una disminución de las disacaridasas adultos procedentes de un mismo ambiente conta­ las características del parásito, el que tanto por su del estado general, situación que se ha observado
yeyunales (lactasa, sacarasa y maltasa), reversibles minado, parecía indicar que existiría una experien­ número como por su calidad antigénica, podrían más frecuentemente en pacientes con hipogamma­
después de un adecuado tratamiento, lo que condu­ cia previa en la infancia que protegería a los adultos. influir en los diferentes modos de expresión clínica. globulinemia y en menores de dos años, siendo una
ciría a un mejor aprovechamiento de la energía Evidencias más concretas aparecieron cuando se Efectivamente, con el advenimiento de los cultivos de las causas más frecuentes de detención del pro­
generada por los alimentos. describió giardiasis recidivante en variados síndro­ axénicos de G. duodena/is y el uso de técnicas de la greso ponderal y de diarrea crónica. Esta situación
Aunque no existen trabajos bien documentados, mes de inmunodeficiencias de tipo humoral; poste­ electroforesis en gel de policriamida (PAGE),inmu­ es reversible una vez erradicada la parasitosis.
pareciera que la aclorhidria gástrica,aumenta la sus­ riormente, se demostró el rol protector de la JgG, la noelectroforesis cruzada (CIE),zimografia y estudio Aunque se ha discutido la posibilidad de cuadros
ceptibilidad de los individuos a la infección por G. cual participaría en la citotoxicidad celular depen­ mediante enzimas de restricción del DNA, se ha biliares producidos por G. duodena/is, no existen
duodena/is y lo mismo ocurriría con otros agentes diente de anticuerpos (ADCC). La lisis de trofozoí­ podido distinguir distintas características antigéni­ suficientes argumentos que favorezcan esta hipóte­
enteropatógenos. Se ha asociado la infección por G. tos inducida por la vía clásica del complemento, se cas en cultivos axénicos de G. duodena/is, lo cual sis y hoy día se sostiene que la giardiasis no tendría 1 .
duodena/is con un aumento de la colonización bac­ efectuaría en presencia de isotipos lgM. traduciría diferencias tanto en antígenos de superfi­ un rol significativo en la patología biliar y pancreá­
teriana del intestino delgado: los gérmenes de­ Tanto los anticuerpos del tipo JgG como IgA cie como excretorios y secretorios del protozoo. tica. Recientemente, se ha comunicado asociación
conjugarían las sales biliares presentes en el duo­ alterarían la adherencia y fagocitosis de los trofozoí­ Evidentemente,el estudio bioquímico en relación de giardiasis con urticaria y artralgias.
deno, las que resultan nocivas para el enterocito, tos por macrófagos y células mononucleadas en a los distintos cultivos y un mayor conocimiento de En resumen, entre los infectados por G. duode­
incrementándose de este, modo el daño. .,-'ratas.a lo que se-suma•una disminución de la adhe­ las características antigénicas de los trofozoítos y na/is se observan dos grupos bien definidos: uno
Existen estudios en relación a la prevalencia de -re'ncia al epitelio: Recientemente se ha demostrado quistes, aportarán información para despejar defi­ asintomático y otro con sintomatología. El grupo
infección en diferentes grupos sanguíneos. Se ha que la IgA específica de las secreciones intestinales nitivamente la hipótesis de que parásitos antigéni- asintomático está integrado por niños bien nutridos

li ·.
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• 140 PARASITOLOGIA MEDICA GIARDJASIS

141 '!

y que presentan respuesta inmune adecuada y por recen de este poder. (Véase Sexta Parte: Diagnóstico día. Sus principales cualidades son la de producir la BIBLIOGRAFIA
adultos, los que albergan escasos parásitos en el de Laboratorio). erradicación de la parasitosis en el 90-96 % de los
intestino y/o tal vez, poco virulentos. El grupo sin­ casos, y además, la de tener una relativa buena to­ Abbaszadegan M, Gerba CP, Rose JB. Detection of Giar­
tomático, se caracteriza por infecciones con elevado Evolución lerancia. dia cysts with a cDN¡\ probe and applications to water
número de parásitos, y en él es frecuente encontrar Asociado al empleo de estos medicamentos se samples. pi. and Envir.Microbiol 1991; 57:927-31.
niños menores de seis meses, con algún grado de Cursa en forma crónica, intermitente o bien ha descrito mutagenicidad en.bacterias y carcinoge­ Abdel Hamid MY, Makled KM, Kamel AM, Metwally DM,
desnutrición o con deficiente respuesta inmune. ¡:.,a autolimitada. En los casos crónicos, se presentan nicidad en ratas, pero a pesar de su vasto uso en Azab ME. Serodiagnosis of giardiasis by counteri­
mayoría de los pacientes sintomáticos presenta un exacerbaciones y remisiones de los síntomas diges­ medicina, estos efectos no han sido corroborados en rnmunoelectrophoresis and indirect irnmunofluorescence
síndrome diarreico recidivante, tal como se descri­ tivos y generales. El curso de la enfermedad, gene­ el hombre. Los nitroimidazólicos no se deben pres­ tests. J Egipt Soc Parasitol 1993; 23:603-8.
bió anteriormente, y una pequeña proporción desa­ ralmente de leve o de moderada intensidad, puede cribir durante el embarazo, al igual que el albendazol, Boreham PFL,UpcroftJA, UpcroftP. Changingapproaches
rrollan un severo cuadro de malabsorción. excepcionalmente tornarse tórpido en pacientes des­ el cual tampoco es recomendable en niños menores lo the study of Giardia epidemiology. In'ternat J
nutridos, de corta edad o con seria deficiencia de la de dos años. Parasitol 1990; 20:479-87.
Diagnóstico respuesta inmune específica. Otros buenos fármacos de amplio uso en niños Buret A, Den Hollander N, Wallis PM y cols. Zoonotic
menores, son los derivados no absorbibles del nitro­ potential of giardiasis in domestic rumiants. J Infect
Se debe sospechar el diagnóstico frente a pacien­ Pronóstico furano, la furazolidona, que se emplea en forma oral Dis 1990; 162:231-37.
tes con una disminución notoria del apetito, peso a razón de 1O mg/kg/día repartidos cada 8 a 12 horas, Craun GF. Water-borne giardiasis. «Giardiasis» (E.A.
estacionario, dolor abdominal predominantemente Infección generalmente benigna. Puede producir por? a 1O días, teniendo una dosis máxima de 400 mg/ Meyer , ed.), Elsiever Amsterdam, 1990: 267-93.
epigástrico si se trata de niños, además de diarrea retraso en el progreso pondoestatural en el niño, día, los cuales presentan cualidades parecidas a los Ganayni GA, Attia RA, Motawea SM. The relationbetween
crónica recidivante o intermitente, con deposiciones secundario a la anorexia, a la diarrea crónica intermi­ nitroimidazólicos y son bien tolerados. Se ha emplea­ ABO blood groups, HLA typing and giardiasis in
esteatorreicas. Se confirma con el examen parasito­ tente o al síndrome de malabsorción. En pacientes do con éxito en esta parasitosis también la quinacrina children. J Egypt Soc Parasitol 1994; 24:407-12.
lógico seriado de deposiciones, en donde se en­ desnutridos, el pronóstico es más severo, puesto y la paromomicina. Gottlieb B, Tapia R, Reyes H. Giardiasis familiar: estudio
cuentran quistes de G. duodena/is. que a la patología propia de la desnutrición, se agre­ En caso de reinfecciones, debe contemplarse los epidemiológico a partir de casos índices. Rev Med
Se pueden utilizar diferentes técnicas de concen­ ga la producida por G. duodena/is. Lo mismo ocurre siguientes aspectos: reinfección por mala manipula­ Chile 1982; 110:224-7.
tración, tales como el método de Teleman, SAF, PAF en inmunocomprometidos (pacientes con SIDA o no ción de alimentos, educación sanitaria insuficiente, Grupta MC, Urrutia JJ. Efecto del tratamiento quimio­
o PVA. Estos métodos tienen un 96 % de rendimien­ SIDA). En estos cuadros, se ha apreciado una franca resistencia parasitaria al fármaco o deficiente res­ terapéutico periódico de parásitos intestinales en el
tp si se procesan tres muestras de pacientes respuesta a los quimioterápicos habituales emplea­ puesta inmune del hospedero. crecimiento de niños preescolares. Arch Latinoam Nutr
eliminadores de quistes. Sin embargo, existe un gru­ dos en esta patología. 1982; 32:825-49.
po de niños que no los eliminan en sus deposicio­ Prevención Prado P. Giardiasis, espectro clínico, diagnóstico y trata­
nes. En ellos, se ha recurrido al estudio del jugo Tratamiento miento en el paciente pediátrico. Rev Asoc Guatemal­
duodenal e, incluso, a la biopsia e impronta con Se dirige a evitar la diseminación en la naturaleza teca Parasitol Med Trop 1991; 6:59-63.
100% de rendimiento. Se dispone en la actualidad de diversos fármacos de los quistes de G. duodena/is, lo que depende del Valencia ME, Me Neill G, Haggarty P y cols. Energetic
Recientemente se está utilizando la serología como eficaces. El mecanismo de acción principal aparente­ grado de saneamiento ambiental, la adecuada dis­ consequences of mild Giardia intestina/is infestation.
otro elemento diagnóstico, la que según la técnica mente ·es la alteración de los potenciales de posición de excretas, la existencia de agua potable in Mexican children. Am J Clin Nutr 1995; 61: 860:
empleada, ha demostrado un rendimiento que oscila oxidorreducción de las membranas del parásito y la y en lo posible el tratamiento de aguas servidas, el 6�
entre el 81% y un 96% (RIFI, ELISA, RHA y ClEF). acción sobre los microtúbulos del citoesqueleto, control de basuras y de insectos que actúan como Vega_ L, Alvarez L, Romo G, Berna! RM. Absorción de
En nuestro medio, la RlFI alcanza una sensibilidad de impidiendo la adherencia del protozoo y la incorpo­ vectores mecánicos. Además se debe mejorar el gra­ proteínas en niños congiardiasis. Bol Med Hosp Infant
82,3% y una especificidad de 86,9%. En la infección ración de timidina. do de educación sanitaria de la población, inculcan­ Mex 1982; 39:19-22.
reciente, tendria valor el hallazgo de IgivI específica, Los medicamentos de elección en la giardiasis do maneras de evitar la infección y la reinfección por
aunque existen autores que discuten su utilidad, son los derivados nitroimidazólicos. De ellos cabe este tipo de parásito y, en especial, las prácti�as de
debido a que en ciertas circunstancias, no podrian destacar el metronidazol en dosis de 20 mg/kg/día, correcta higiene personal y de la manipulación de
discriminar infecciones antiguas, dando lugar a fal­ administrado por vía oral dividido cada 8 ó 12 horas, alimentos.
sas reacciones positivas. por 7-10 días, con una dosis máxima de I g. La
Con el advenimiento de anticuerpos monoclona­ nitroimidazina oral, en dosis de 20 mg/kg/día dividida
les a antígenos específicos, se ha comunicado la en 2 a 3 dosis por 5 días; el ornidazol y tinidazol que
utilidad de ELISA en deposiciones, la cual tendria la tienen un 96% de rendimiento en una dosis única de
ventaja de reconocer masas moleculares de 30 a 66 50 mg/kg/día, existiendo una dosis máxim;;t de 2 g.
kDa y de poseer un 98% de sensibilidad y 100% de Con el empleo de los derivados nitroimidazólicos, no
especificidad. También con· el empleo de sueros es recomendable la ingestión de alcohol durante el
hiperinrnunes se ha logrado detectar antigenos pa­ tratamiento por tener un efecto antabuse y se ha
rasitarios en heces, mediante pruebas de ínmunopre­ demostrado teratogenicidad en ratas. Actuarían so­
cipitación, con aparente éxito. En plena evaluación bre la formación de tubulina y giardina del
está la PCR que está basada en pruebas del DNA que citoesqueleto del protozoo.
!'.
il
detecta el gen específico de la giardina, lo que per- Recientemente se ha demostrado la eficacia del
°
mitiría discriminar quistes vitales .4e los que mi-lo --- albendazol oral en dosis de 10 mg/kg/día por tiem­
son. También a este examen·se le ha atribuido capa­ pos que oscilan entre 1 y 5 días. La dosis máxima
cidad de diferenciar cepas virulentas de las que ca- recomendable de este medicamento son 15 mg/kg/
l
!
.Capítulo 11 JSOSPOROSIS 143

ISOSPOROSIS
�a
GAMETOGONIA (e)

füAN CARLOS WEITZ

GAMOGONIA

Definición. Es la infección intestinal del hombre libres en el lumen, ingresarán a otras células intesti­
por Isospora belli, que puede provocar un cuadro nales repitiendo el ciclo esquizogónico. Como ocurre
diarreico agudo intenso o una diarrea crónica severa,
según el estado inmunitario del hospedero.
en los coccidios, luego de varios de estos ciclos,
estos merozoitos ingresan a las células y se transfor­
HOMBRE
man en gametos, multiplicándose en el caso de los
Biologia gametos masculinos (microgametocitos) y formando AMB][ENTE
un gameto único femenino (macrogametocito). Los (d)
Isospora belli es un protozoo coccidio descrito gametos masculinos son móviles y una vez que
por Virchow en 1860 que infecta sólo al hombre y abandonan el enterocito, fecundan a los gametos
cuyo ciclo comprende etapas de reproducción sexual femeninos, formándose el cigoto, que sale al lumen
y asexual que se desarrollan en el intestino humano intestinal como ooquiste inmaduro de Jsospora belli.
y en el ambiente. Todo este ciclo se lleva a cabo en las células del
El ooquiste de Jsospora belli es eliminado con las intestino delgado, principalmente en el duodeno ter­
deposiciones del hombre infectado, y tiene una for­ minal y yeyuno.
ma ovalada que mide 20 a 30 µm de largo por I O a 20
µm de ancho, en el momento de su eliminación con­ Epidemiología ooquistés
tie¡ie en su interior un esporoblasto (cigoto), el cual,
si las condiciones ambientales lo permiten comienza El ooquiste de Isospora belli, al ser emitido no ESPOROGONIA
su maduración (Lámina 4). Se divide en dos esporo­ esporulado al ambiente a diferencia de otros coccidios,
blastos, los que posteriormente desarrollan cuatro no constituye un problema de infección intrahos­
esporozoitos, rodeados de una doble membrana, pitalaria o familiar, pero en el ambiente estos elemen­
constituyendo el esporoquiste. Por lo tanto, el ooquis­ tos parasitarios son capaces de resistir varios meses, Figura 11-2. Ciclo evolutivo de Jsaspara belli. La fonna infectante es el ooquiste maduro (a), cuyos esporozoitos
te maduro contendrá dos esporoquistes con cuatro según sean las condiciones de humedad, temperatu­ penetran al epitelio intestinal y se multiplican fonnando esquizontes, los cuales quedan en libertad al destruirse la
esporozoitos cada uno (Figura 11-1 y Lámina 5). Este ra y exposición solar. célula hospedera y originarán merozoitos que se introducen en nuevos enterocitos para repetir varias veces este ciclo·
ooquiste al ser ingerido por el ser humano (Figura 11- Esta coccidiosis era escasamente conocida y por (b). Algunos de estos merozoitos generarán nuevos gametos (c), los que luego de la gamogonia, producen cigotos que
2), libera los esporozoitos en el lumen intestinal, cada lo tanto, existe un número reducido de estudio en saldrán al medio externo como ooquistes inmaduros (d), los cuales evolucionarán a ooquistes maduros o esporulados.
uno de ellos ingresa a un enterocito multiplicándose poblaciones, por lo que la prevalencia real de esta
en forma asexuada en una vacuola parasitófora, dan­ infección no se conoce. Ciertas púb!icaciones dan
do origen a múltiples merozoitos, los que, al quedar . algunas luces al respecto, por-..rjemplo el clásico
estudio de Jarpa y cols., quienes en 12.398 pacientes países, como la segunda o tercera causa de la diarrea en los imnunocompetentes, o se perpetuará como
con sintomas digestivos (1955-1962), obtuvieron una crónica en estos pacientes , y las prevalencias ocurre en los comprometidos inmunológicos. Lo
prevalencia de 3,17%. Existen otras experiencias ais­ son variables según los diferentes estudios y meto­ más grave en estos casos, es que lsospora adquiere
ladas como la realizada en una comunidad de aborí­ dología, alcanzando cifras que van desde 0,4 al un estado quiescente, en que no es eliminado del
genes en Queensland, Australia (1992), que en 17.642 16%. En nuestros estudios la isosporosis es de 1O, 1% intestino y vuelve a reactivarse de acuerdo con el
individuos encontró una frecuencia de 0,2%. Han en pacientes con SIDA y diarrea crónica. En la nivel de la inmunidad celular del momento.
existido, además, algunos brotes epidémicos de esta diarrea aguda que afecta a pacientes VIH/SIDA se Isospora belli se loéaliza en las células de la
parasitosis como la descrita en la región norte de ha encontrado en 5% como agente etiológico en mucosa del intestino delgado, en donde se observan
Chile, y ocasionalmente, este protozoo causa diarrea México. los distintos estadios de su ciclo, tanto los sexuales
del viajero. como los asexuales, provocando destrucción epite­
En los pacientes inmunocomprometidos, la Patología lial, acompañados de reducción de la altura de las
isosporosis ha sido conocida como un agente capaz vellosidades e hipertrofia de las criptas, especial­
de producir diarrea crónica, descrita en un comienzo La intensidad del daño intestinal provocado por mente en pacientes con SIDA. En estudios anato­
en pacientes con cánceres, especialmente hemato­ l. belli está relacionado por una parte con su núme­ mopatológicos se observan merozoitos en el lumen
lógicos (Hodgkin, leucemias) o con terapia inmuno­ ro, virulencia y capacidad de penetración de los intestinal, en la lámina propria e incluso dentro de
.Sl:1Presora. En la_ .a.ctl:!\l_lidad ha adquirido gran im­ tejidos. Y por otro lado, con el estado inmunológico vasos li11fá,\icos. Estas alteraciones provocan una

. . ·•.!L.
Figura 11-1. Ooquiste de Jsaspara belli. portancia en el SIDA, considerándose en algunos del hospedero, lo que 9eterrninará la eliminación reacción inflamatoria leve a moderada, pero según
del agente luego de su ciclo biológico, como ocurre los casos, puede ser severa y llevar a necrosis de
1'44 PARAS/TOLOG/A MEDICA !SOSPOROS/S 145

mucosa y submucosa. Los mecanismos íntimos por frecuente y existe una publicación de sólo un caso agua y electrólitos. Se les puede suministrar trime­ in patient with the acquired immunodeficiency syn­
los cuales este protozoo y otros coccidios son capa­ de SIDA con isosporosis extraintestinal. En cam­ toprim-sulfametoxazol según la intensidad y pro­ drome. N Engl J Med 1986; 315:87-90.
ces de provocar daño, no se conocen y aparente­ bio, recientemente se ha comunicado la participa­ longación del cuadro. En los pacientes con esta Fannan J, Brunetti J, Baer J, Freiman H y cols. AIDS
mente la invasión celular desencadenaría los meca­ ción de Jsospora en la colangiopatía del SIDA, e parasitosis y con terapia antitumoral o corticoterapia, related cholangiopancreatographic changes. Abdom
nismos inflamatorios por mediadores celulares más incluso provocando colecistitis acalculosa, síndro­ se deben extremar los cuidados anteriores, suman­ lmaging l 994;19:417-22.
que por la existencia de toxinas propias del parási­ mes en que se han descrito otros agentes como Ci­ do a la terapia con sulfas, la disminución de los Greenberg S, Davey M, Zierdt W, Waldmann T. Isospora i¡¡
to. Dentro de este contexto puede tomarse la partí-, tomegalovirus, Cryptosporidillm y Microsporidios, fármacos inmunosupresores, si ello es posible. belli enteric infection in patients with human T cell ,,
cipación activa de eosinófilos en el infiltrado infla­ entre otros. Los pacientes VIH/SIDA con isosporosis deben leukemia virus type I associated adult T cell leukemia.
matorio que existe en esta enfermedad. recibir tratamiento con trimetoprim 160 mg / sulfa­ Am J Med 1988; 85:435-8.
Diagnóstico metoxazol 800 mg, 4 veces al día por 10 días y Jarpa A, Zuloaga M, Zura M. Coccidiosis humanas en
Sintomatologfa posterior terapia de mantención. En los individuos Chile: infecciones por Isospora be//i y Sarcocystis
La sospecha clínica de isosporosi� se plantea ante con hipersensibilidad por sulfas, se ha sugerido piri­ /10111i11is (lsospora ltominis). Bol Chile Parasitol 1981;
El cuadro clínico de esta enfennedad es variable un paciente con una diarrea aguda intensa, el com­ metamina 75 mg/día asociado a ácido folínico 1Omg/ 36:49-53.
y dependerá de la competencia inmunológica del promiso general y la presencia de eosinofilia al día. Miro J, Buira E, Mallolas J, Gallar! T y cols. Linfocitos ,¡
hospedero. En los inmunocompetentes se produce hemograma. En los inmunocomprometidos debe Existen comunicaciones con resultados prelimi­ CD4+ e infecciones oportunistas y neoplasias en pa­ ! !

,,,,, un cuadro brusco, luego de un período de incuba­ estudiarse esta posibilidad ante una diarrea crónica; nares de tratamiento con roxitromicina, diclazuri! y cientes con infección por inmunodeficiencia. Med
ción de 6 a 1O días, caracterizado por anorexia en estos casos, no se observa eosinofilia. letrazuril. Clin Barc 1994; 102:566-70.
marcada, náuseas, vómitos en el 50% de los casos La presencia de ooquistes de Jsospora bel/i se Papel, Verdier R, Johnson W. Treahnent and prophylaxis
y fiebre hasta 38ºC .los primeros días (75% de los puede objetivar por diferentes métodos (véase la Prevención of Isospora bel/i infection in patient with the acquired
pacientes). Sexta Parte: Diagnóstico de Laboratorio). El más immunodeficiency syndrome. N Engl J Med 1989;
El síntoma principal es una diarrea líquida o utilizado es el examen parasitológico seriado de La prevención para los inmunocompetentes es 320:1044-7
pastosa y en algunos casos lientérica, muy abun­ deposiciones, en que se observa este elemento y los similar a la de otras enteroparasitosis, en especial lo Prociv P, Luke R, Quayle P. Jsosporiasis in the aboriginal
dante, con una frecuencia diaria de 5 a 6 veces y cristales de Charcot Leyden. En caso de encontrar referente a ingestión de frutas y verduras debida­ population ofQueensland Med J Aust 1992; 156:115-7
hasta sobre 15 veces al día. Se acompaña de dolor sólo los cristales, sumado a los otros elementos clí­ mente lavadas. Restrepo C, Macher A, Radany E. Disseminated extrain­
abdominal cólico, difuso y meteorismo acentuado. nicos descritos, deben orientar al diagnóstico de Respecto de los pacientes con diagnóstico sero­ testinal isosporiasis in a patient with acquired immu­
A todo lo anterior se le agrega astenia, adinamia isosporosis, sin olvidar que en otras entidades clíni­ lógico de VIH, desde un comienzo, deben abstener­ nodeficiency syndrome. Am J Clin Pathol 1987;
marcada y baja de peso de 8 kg promedio. La dura­ cas e incluso otras parasitosis, pueden encontrarse se de la ingestión de verdura_s crudas, debido a que 87:536-42.
ción del cuadro es variable, se prolonga por lo ge­ estos elementos en las deposiciones. esta infección se adquiere en fase temprana de la Sagua H, Delano C, Fuentes A, Becker P. Brote epidémi­
neral entre 4 a 6 semanas y en algunas ocasiones La técnica de flotación con sulfato de zinc, es enfermedad y es posible erradicarla. Lo anterior es co de isosporosis por Isospora be/Ji en la ciudad de ,,
I'.

puede ser mayor; la intensidad de la diarrea va otra herramienta de valor en el diagnóstico de la válidÓ para·paci�ntes que serán sometidos a terapia Antofagasta,. Chile. Consideraciones sobre 90 casos
disminuyendo considerablemente en las últimas isosporosis, pero se debe tener especial cuidado en antitumoral o corticoterapia. diagnosticados en 3 meses. Bol Chile Parasitol 1978;
semanas. la preparación de la muestra y la lectura debe efec­ En pacientes con SIDA y que han sido tratados 33:8-12.
En los pacientes con inmunocompromiso y en tuarse inmediatamente luego del centrifugado, ya por diarrea por isosporosis, debe efectuarse profi­ Shaffer N, Moore L. Chronic traveler's diarrhea in á.
especial los con VIH/SIDA padecen de una diarrea que de no hacerlo los ooquistes pueden deteriorarse laxis secundaria con trimetoprim 160 mg y sulfa­ nonnal host due to Isospora belli. J lnfect Dis 1989;
crónica de intensidad variable, pudiendo llegar a y dar falsos negativos. metoxazol 800, 3 veces por semana y en caso de 159:596-7.
ser muy severa. En general, esta diarrea es intenni­ En los últimos años, se ha preconizado la confec­ hipersensibilidad a sulfas, se ha sugerido el uso de Soave R, Johanson W. Cryptosporidium and Isospora
tente, y a diferencia de otros protozoos, se ha obser­ ción de frotis de deposición a partir del sedimento pirimetamina 25 mg diarios. be/Ji infections. J lnfect Dis 1988; 157:225-9.
vado que estos pacientes la adquieren cuando los del parasitológico, para luego teñirlos con Ziehl Westerman E, Christensen R. Chronic Isospora be/li
recuentos de linfocitos CD4 son mayores de 200 Neelsen modificado o safranina, ambas técnicas de '
infection treated with Co-trimoxazole. Ann Intem í
cel/mm3• Estos pacientes no logran eliminar a la alta sensibilidad, más la obtención de una prepara- BIBLIOGRAFIA Med 1979; 91:413-4. !
Jsosporo bel/i de sus intestinos por lo que, al igual ción permanente. Weiss L, Perlman D, Shennan J, Tanowitz H, Wittner M.
que con Cryptosporidium, tendrán recidivas de su En nuestra experiencia, aún no publicada (As­ Benator D, French A, Beaudet D, Levy C, Orenstein J. !sospora belli infection: treatment with pyrimetamine.
cuadro diarreico por sobre el 47% de los casos. torga y Weitz), la sensibilidad de estas técnicas es Isospora belli infection associated with acalculous Ann lntem Med 1988; 109:474-5.
Algunos pacientes sufren de infección concomitan­ significativamente mayor que la flotación y él cholecystitis in a patient with AIDS. Ann lntem Med Weitz JC, Botehlo R, Bryan R. Microsporidiosis en pa- ·
te de J. belii con Cryptosporidium pan1L1111, en una coproparasitológico de deposiciones. 1994; 121:663-4. cientes con diarrea crónica y SIDA, HIV asintomáti­
frecuencia de 3 a 4%. En nuestra experiencia, he­ Existen procedimientos más invasivos para la De Hovitz J, Pape J, Boncy M, Johnson W. Clínica! cos y pácientes con diarrea· aguda. Rev Med Chile
mos tenido la asociación triple con microsporidios; obtención de muestras como el sondeo duodenal o manifestations and therapy of Isospora be/Ji infection 1995; 123:849-56.
en es.tos casos, el pronóstico es francamente peor efectuar biopsias intestinales mediante endoscopia
que padecer sólo de isosporosis crónica. En pacien­ para evidenciar la presencia del protozoo en los
tes con diarrea crónica por isosporosis de más de un enterocitos.
mes de duración, debe sospecharse la infección por
VIH, ya que esta coccidiosis se considera un marca­ Tratamiento
dor de la enfermedad.
Si bien se ha descrito la posi.bil,idád de que Jsospoe::: · Los pacientes inmunocompetentes con diarrea
ra belli invada tejidos, especialmente por los·ha­ aguda por J. belii, deben ser tratados con medidas
llazgos anatomopatológicos descritos, esto no es dietéticas habituales y en especial, restitución de
Capítulo 12 CRlPTOSPORID/OSlS 147

CRIPTOSPORJDIOSIS
JUAN CARLOS WEITZ y RENZO TASSARA MEROGONIA

Definición. La criptosporidiosis es la infección interior, y es finalmente excretailo al exterior con las


por protozoos del género Cryptosporidit1111 que afecta deposiciones, como ooquiste inmediatamente
al aparato digestivo de animales vertebrados, inclu­ infectante.
yendo al hombre y ocasionalmente, puede infectar Algunos autores han descrito dos tipos de ooquis­ pared
(
otros epitelios como el respiratorio. tes, uno de pared gruesa, resistente, que sale al delgada g) 1 i
En la actualidad se acepta que existen varias exterior a infectar a otros hospederos susceptibles, i 1,
especies de Cryptosporidium, las mejor caracteriza­ y otro de pared delgada que da lugar a la autoinfec­
das son Cryptosporidium baileyi y Cryptosporid/11m ción, especialmente en los pacientes imnunocom­ HOMBRE
meleagridis que infectan aves; y Cryptosporidium prometidos. pared
(
muris y Cryptosporidium parvum a mamíferos. Si gruesa f)
bien pudieran existir infecciones cruzadas se consi­
El periodo prepatente de esta infección es de dos
a cinco días y el período patente en inmunocom­ AMBIENTE n
'.\
,,
!
dera a Cryptosporidium parvum la especie predo­ petentes puede alcanzar más de un mes; en cambio, ¡:
minante en el ser humano. en inmunocomprometidos se puede prolongar por 1:
il
meses e incluso, años.
Biología ¡¡
!l
Epidemiología ooquistes ¡
El.ciclo biológico de este protozoo es similar al ¡
de otros coccidios, con etapas asexuadas y sexuadas La criptosporidiosis se transmite fundamental­ .· ,¡
para culminar con la formación del ooquiste de mente por la ingestión de agua y alimentos contami­ ESPOROGONIA

1
Cryptosporidium, elemento infectante de esta para­ nados con ooquistes, los que están muy diseminados ' \
sitosis (Lámina 6). Este ooquiste tiene forma esféri­ en el ambiente según estudios de ríos, filtros de
Figura 12-1. Ciclo evolutivo de Cryptosporidium parvum (monoxénico). Los esporozoitos (a) contenidos en el
ca, mide 4 a 6 µm de diámetro y contiene cuatro aguas etc.; algunos autores postulan a la inhalación I!
ooquiste, son las formas infectantes que se multiplican asexualmemte en la zona apical y extracitoplasmática del
1: esporozoitos en su interior. Al ingresar por vía oral como otro I_Ilecanismo; sin embargo es raro en el
epitelio intestinal, dando origen a merontes tipo I con seis a ocho merozoitos cada uno, los cuales repiten el proceso·· :\

ni,1 al tracto digestivo (Figura 12-1), por la acción del hombre. 1!


en nuevos enterocitos (b). Luego se forman merontes tipo 11 (c) con cuatro merozoitos que inician la gametogonia.con ¡!
ácido clorhídrico y enzimas digestivas, se liberan Esta parasitosis puede causar infecciones respi­
la producción de los gametos (d) y la gamogonia con la formación de ooqistes (e). Los ooquistes que salen al exterior ;¡1
1,1
H¡¡
estos esporozoitos, colonizan las células epiteliales ratorias severas en aves y cuadros de diarrea aguda
¡'q y se multiplican en la zona apical microvellositaria, son de pared gruesa y resistente (f), pero una pequeña porción son de paredes delgadas (g) y responsables de la
grave en el ganado, especialmente bovino, donde ha .. . .....-s...�.•--�-----..-·

' il1:·
I' autoinfección que perpetúa la enfermedad en pacientes inmunocomprometidos
•;,! dentro de una vacuola parasitófora intracelular. Las demostrado ser una temible infección en terneros .
dos primeras etapas de multiplicación son asexuadas. En el homqre constituye una de las principales
En un comienzo, a partir de un esporozoito se cons­ causas de diarrea aguda en niños, los que requieren

l!
tituirá el meronte I que contiene seis a ocho hospitalización por la severidad del cuadro. En al­ tas zonas de un país, según sean las características La criptosporidiosis constituye, además, una de
merozoitos en su interior, que se liberan y reciclan ambientales y climáticas. las causas de diarrea del viajero, describiéndose
l,·
gunos trabajos ocupa el primer lugar dentro de las
En los pacientes inmunocomprometidos la crip­ numerosos casos, especialmente norteamericanos,
formando nuevos merontes I. Posteriormente, estos
merozoitos ingresan a nuevas células y se constituye
diarreas agudas parasitarias y entre el cuarto y quinto
de todas las etiologías infecciosas. Las ¡irevalencias tosporidiosis causa diarrea crónica severa, con fran­ provenientes del Caribe y de Rusia. i'
el meronte II que contiene cuatro merozoitos. Los en estos niños son muy variables, desde 1,4 % en ca mayor relevancia en el síndrome de inmunode­ Esta infección posee varias características que la \
merontes II se liberan al lumen y no reciclan, ingre­ Gales a 16,7% en Haití. Trabajos que recopilan ficiencia adquirida (SIDA), donde constituye la prin­
cipal causa de diarrea crónica, alcanzando cifras
hacen fácilmente difundible: su baja dosis infectan­
te; la prolongada excreción de ooquistes por varios
!
san a nuevas células e inician la etapa sexuada de diferentes publicaciones dan como cifras promedios '{:
este ciclo. Algunos de ellos se diferencian en game­ de 2,2% en países industrializados y 8,5% en países variables: en Estados Unidos se ha descrito infec­ días e incluso semanas, luego de finalizar el cuadro \

tos masculinos o microgametocitos, en un número en desarrollo. En Chile, se ha diagnosticado a C. tando desde 3 a 15%. En un estudio multicéntrico diarreico; la gran resistencia que posee el ooquiste :\·,
de catorce a dieciséis por cada merozoito, y en ga­ parvum entre 3,1 a 19,3% de los niños hospitaliza­ europeo se alcanzó como cifra promedio de 6,6% en a las condiciones climáticas (permaneciendo meses
metos femeninos o macrogametos (uno por cada dos con diarrea aguda. Estudios en adultos con dia­ 6.548 pacientes, pero hay comunicaciones con fre­ en el ambiente) y a la mayoría de los desinfectantes
merozoito). Los microgametocitos son liberados y rrea aguda, dan prevalencias inferiores a 3%. cuencias que alcanzan el 37%. En Africa, las pre­ utilizados en el laboratorio y de uso común. Estas
por su movilidad van a fecundar, cada uno de ellos, Según diversos estudios, la incidencia de esta valencias varian desde 22% en Zaire a 48% en propiedades convierten a esta infección en un pro­
a un macrogametocito. Se forma de esta manera el infección nq es. uniforme en el año, presentando Uganda. En América las cifras mayores se alcanzan blema habitual en jardines infantiles, en centros de
ooquiste que madura in situ; es d�cir, se produce la cíérto predoffünio es_tacional_°{ ¡iiá�Jrecuente en pe­ en Haití con 42% de prevalencia. En Chile, este .. . iit\!nción de pa.cjentes desnutridos, y causa brotes
esporulación, formándose cuatro esporozoitos en su ríodos húmedos ) e incluso diferencias en las distin- agente alcanza al 16,9% en las diarreas crónicas de · intrahospitalariós y del personal de salud que atien­
pacientes con SIDA. de a estos pacientes.
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l48 PARASITOlOGIA MEDICA CRIPTOSPORIDIOSIS 1ffi tl\l�149fü


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� B\'ilLIOil:.CP. ,,.,
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. ·. Ultimamente se ha ido incrementando el número inmunocomprometido. Existen, según algunos tra­ biopsias bronquiales e incluso en parénquima pul­ Con la IFI, en cambio, existe u �l.w, ' et,·,

de'cbriÍunicaciones de brotes de criptosporidiosis bajos, individuos asintomáticos, rara vez inmuno­ monar. Se le ha encontrado asociado a veces a Cito- riencia en criptosporidiosis y los resu ·
i-
por ingesta de aguas contaminadas con este agente, comprometidos, que excretan ooquistes de C. parvum 111ega./ovirus y Pnezmzocystis carinii principalmen­ dos varían de acuerdo con el tipo de monoclonal, de
ya sea por agua de piscina, aguas de ríos, e incluso en sus deposiciones, y su importancia epidemioló­ te, son afecciones de muy mal pronóstico y general­ muestra y las técnicas con que se compararon. Si
por filtraciones de las redes de agua· potable. El más gica radica en la difusión de la infección. mente existe concomitancia con infección intesti­ bien existen trabajos que muestran sensibilidades
importante es un brote que afectó a más de 400.000 nal. En el árbol biliar se le ha descrito en diversos muy superiores que las tinciones habituales, hay
personas en Milwaukee, Estados Unidos. Criptosporidiosis en el paciente inmunocom­ cuadros, desde la colecistitis alitiásica hasta la colan­ otros que demuestran resultados similares. En nues­
petente. Durante los primeros tres días los pacien­ gitis esclerosante, siendo uno de los agentes ligados tra experiencia, estudiando pacientes con diarrea
Patología tes presentan anorexia, náuseas y vómitos en el a la colangiopatía del SIDA junto a Citomegalovi­ crónica y SIDA se demostró sensibilidades de 78,3%
60% de los casos, febrículas e incluso fiebre de rus, Microsporidizmz, Jsospora belli y Mycobacte­ para IFI; 86,9% para Z. Neelsen; y 91,3% para
C1yptosporidiu111 se ha encontrado a lo largo de hasta 38,5 ºC en la mitad de ellos. La diarrea es de rium entre otros y siempre existe colonización in­ safranina.
todo el tracto digestivo desde la faringe hasta el mal olor, puede ser profusa, con una frecuencia testinal concomitante. Se han desarrollado técnicas de inmunoensayo
recto, siendo el yeyuno el sitio de mayor predilec­ variable de tres a doce deposiciones en el día; su La colonización del conducto pancreático, pro­ (ELISA) para la detección de antígenos fecales de
ción. Además, se ha descrito en vesícula biliar , vía duración oscila entre los siete y doce días, pero vocando elevación de enzimas pancreáticas se ha Cryptosporidium parvum, inicialmente con anticuer­
pancreática y aparato respiratorio. puede ser tan breve y presentarse por tres días y tan comunicado en un paciente inmunocornpetente, en pos policlonales, para posteriormente utilizar mo­
Los hallazgos histológicos son inespecíficos, ob­ larga que se puede prolongar por veintiún días. En niños con compromiso inmunológico severo combi­ noclonales, logrando sensibilidades que varían en­
servándose en intestino distintos grados de altera­ la mitad de los pacientes existe dolor abdominal nado y en SIDA. tre 83,3 a 98%, con excelente especificidad. En
ción de la arquitectura vellositaria, con atrofia cólico difuso que se alivia con la evacuación; la baja nuestra experiencia obtuvimos una sensibilidad de
vellositaria variable desde leve a severa y aumento de peso se ha consignado en el 25% de los casos, Diagnóstico 89,6% comparada con las tinciones de rutina.
de las criptas. Existe infiltración también variable especialmente en los niños. Este cuadro afecta a Recientemente se han desarrollado distintos ti­
de la lámina propria con células plasmáticas, linfo­ adultos y niños, pero de preferencia a los menores En el diagnóstico de laboratorio dé esta parasito­ pos de PCR (reacción en cadena de la polimerasa)
citos, polimorfonucleares y eosinófilos. A la micros­ de dos años, en los que esta infección puede presen­ sis se pueden aplicar desde técnicas directas sim­ con los que se logra detectar hasta 500 ooquistes por
copia electrónica se ob$er.va al C1yptosporidiu111 tarse en forma más severa, con deshidratación de ples hasta métodos de mayor complejidad corno los gramo de deposición, mejorando el rendimiento de
adherido a la superficie luminal del enterocito, en grado variable que puede requerir hospitalización inmunológicos. las técnicas habituales e inmunológicas entre 100 y
una vacuola parasitófora intracelular pero extracito­ para su manejo hidroelectrolítico: Las técnicas más ampliamente difundidas para el 1.000 veces.
plasmática, con pérdida de las microvellosidades en diagnóstico de ooquistes de Cryptosporidi11111 par- La obtención de biopsias de intestino delgado y
el sitio de crecimiento y con cierto grado de distor­ Criptosporidiosis en el paciente inmunocom­ 1111111 se basan en la recolección de la deposición en posteriormente aplicar tínción habituales, especial­
sión de las restantes. Los cambios citoplasmáticos prometido. La mayor experiencia acumulada es en fijador, la aplicación de métodos de concentración, mente en pacientes en que los métodos directos han
son mínimos. pacientes VIH/SIDA con criptosporidiosis, en los para luego confeccionar frotis de deposición que se sido negativos, permite visualizar a Cryptospori­
Los mecanismos íntimos de la producción de que se ha relacionado su evolución con el número de tiñen con Ziehl Neelsen (en frío o en calor), con dium en el borde apical del enterocito. Como méto­
diarrea no están aclarados, pero estudios experi­ linfocitos CD4; con más de 180/ mm' el pronóstico safranina contracolorada con azul de metileno, los do muy inhabitual se puede proceder a estudiarlas
mentales sugieren que la malabsorción de nutrien­ es bueno, describiéndose un cuadro clínico similar que deben ser leidos con aumento de 400 y 1000x; con microscopia electrónica. Estas biopsias pueden
tes es la principal causa de ella y estaría dado por al inmunocompetente; en cambio, con cifras meno­ ambos métodos tienen similar sensibilidad, repro­ procesarse con monoclonales para mejorar el
las alteraciones en las vellosidades y microvellosi­ res de CD4 la criptosporidiosis se vuelve crónica, de ducibilidad, bajo costo y permiten mantener las diagnóstico.
dades; secundariamente, esta malabsorción llevaría mal pronóstico y los pacientes no logran liberarse láminas guardadas por tiempo prolongado para po­ Los estudios serológicos mediante ELISA han
a un sobrecrecimiento bacteriano que agravaría esta del parásito. En estos pacientes sé observa compro­ der ser enviadas a un centro de referencia o rees­ determinado que la seropositividad es mayor en
condición. Existen trabajos que demuestran prue­ miso del estado general y baja de peso importante, tudiarlas (Lámina 6). países en desarrollo y en pacientes con nivel so­
bas de absorción alteradas en humanos con diarrea acompañando a un cuadro diarreico severo, con Los frotís de deposición se pueden teñir con cioeconómico bajo, asimismo se ha observado que
crónica por esta infección. deposiciones líquidas, profusas, de gran volumen, Aureamina y Aurearnina rodarnina y leer al micros­ la tasa de anticuerpos aumenta con la edad. La
La diarrea tipo secretoria descrita en pacientes tipo coleriforme en algunos casos, con un número de copio de fluorescencia con aumento de 400x -todas utilidad de la serología se ha circunscrito a estudios
inmunocomprometidos sugiere la presencia de una evacuaciones desde seis a más de veinte al día, técnicas de fluorescencia directa- especialmente epidemiológicos.
toxina, sin embargo, ésta no ha podido ser caracte­ eliminando volúmenes de uno a tres litros, y en utilizadas en lectura de gran número de especímenes Los resultados obtenidos por las téénicas de diag­
rizada. casos extremos más de diez litros diarios. Estos o en estudios epidemiológicos (Lámina 7). nóstico mencionadas deben ser analizados cuidado­
Se requieren estudios sistemáticos para determi­ síntomas persisten por meses y años, siendo inter­ Los anticuerpos monoclonales, se han aplicado en samente y en relación con el tipo de paciente en
nar los mecanismos por los cuales este agente y sus mitentes, pasando por períodos de casi remitencia técnicas corno la inmunofluorescencia directa (IFD) estudio, especialmente en pacientes con SIDA, en
metabolitos o toxinas son capaces de alterar el fun­ total para luego volver a presentar los síntomas y la indirecta (IFI) con el propósito de mejorar la ca­ quienes recomendamos repetir el análisis si éste fue
cionamiento del intestino. descritos. Esta diarrea crónica puede ser la lidad de este diagnóstico. Si bien la IFD fue la pri­ primeramente negativo, en especial si no existe etio­
precipitante de la fase final de estos pacientes o mera en desarrollarse, ha sido utilizada en un redu­ logía de su diarrea crónica. Si bien la sensibilidad
Sintomatología contribuir significativamente al síndrome de cido número de estudios, especialmente en la detec­ obtenida por diversos autores varia desde excelen­
emaciación. El pronóstico empeora si existe ción de este agente en aguas. Existe en el mercado un tes resultados con una técnica y con una muestra,
La sintomatología de la criptosporidiosis es va­ coinfección con Jsospora belli, microsporidios u kits de diagnóstico con monoclonales anti-Cryptos­ otros investigadores proponen analizar un mayor
riada y su forma de presentación guarda relación otros agentes. poridium y anti-Giardia lamblia que según algunos número de muestras en estos pacientes.
principalmente con - la competencia inmunológica En los pacientes con SIDA, el C. parvum puede autores, posee sensibilidades y especificidades cer­
del paciente._ Si bien existe sobreposición,_de,sínto­ comprometer-.otros órganos corno por ejemplo el canas al 100% y una.mayor sensilJilidad que las téc­ Tratamiento
mas, se pueden caracterizar, en forma general, los aparató respiratorio, donde se le ha encontrado en nicas de uso corriente ál aplicarlas en muestras 'on·
c

cuadros clínicos en el inmunocompetente y en el expectoración, secreción bronquial, cepillado y una concentración variable de ooquistes. En el paciente inmunocompetente el tratamiento
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1 !
.!50 PARASITOLOGIA MEDICA CRJPTOSPORIDIOS/S 151

es sintomático; en cambio, en los pacientes inmuno­ quieran los pacientes, sino para evitar la difusión en Hoepelman A. Curren! therapeutic approaches to cryptos­ ción de ooquistes de Cryptosporidi11111 sp en las heces
comprometidos debemos tener un enfoque distinto. el grupo. poridiosis in immunocompromised patients. J Anti­ de niños con síndrome diarreico. Rev Chil Pediatr
En el caso de los inmunocompromisos no SIDA, en En los individuos inmunocompetentes la preven­ microb Chemother 1996; 37:871-80. 1994; 65:7-10.
general basta con tratar la causa de la inmuno­ ción es similar a la de otras enteroparasitosis, en Mac Kenzie W, Hoxie N, Proctor M, Gradus M, Blair K, Tee G, Moody A, Hunt A, Chiodini P. Comparison of
supresión, especialmente en pacientes con terapia especial en lo referente a ingestión de frutas y ver­ y cols. A massive outbreak in Milwaukee of Cryptos­ techniques for detecting antigens of Giardia /amblia
supresora (corticoides, azatioprina, etc.), en la que se duras debidamente lavadas. poridi11111 infection transmitted through the public and Cryptosporidium parv11m in faeces. J Clin Pathol
debe disminuir o ajustar las dosis lo suficiente como Respecto de los pacientes inmunocomprometidos water supply. N Engl J Med 1995; 331:161-7. 1993; 46:555-58.
para tener el efecto deseado y lograr eliminar al agen-' deben abstenerse de la ingestión de verduras crudas Mac Pherson D, Me Queen R. Cryptosporidiosis: Ungar B. Enzyme linked immunoassay for detection of
te. y agua sin hervir. Ello es especialmente importante multiattribute evaluation of six diagnostic methods. J Cryptosporidium antigens in fecal specimens. J Clin
En los pacientes con SIDA el tratamiento con en los pacientes VIH/SIDA debido a que esta infec­ Clin Microbio! 1993; 31:198-202. Microbio! 1990; 28:2491-95.
fármacos antirretrovirales ha demostrado cierto be­ ción intestinal no se puede erradicar una vez que se Manatsathit S, Tansupasawasdikul S, Wanachiwanawin Weitz JC, Astorga B. Cryptosporidi11111 parv11m en pa­
neficio, así como el octetride, somatostatina sintética adquiere, ya que no existe un tratamiento para ello. D y cols. Causes of chronic diarrhea in patients with cientes con diarrea crónica y SIDA: diagnóstico me­
que se emplea en forma inespecífica ( en los pacien­ Los pacientes con SIDA y criptosporidiosis que se AIDS in Thailand: a prospective clinical and micro­ diante inmunofluorescencia indirecta con anticuer­
tes con diarrea severa ) con el que se obtiene bene­ hospitalizan, deben ser manejados para evitar que biological study. J Gastroenterol 1996; 31:533-7. pos monoclonales, Rev Med Chile 1993; 121:923-26.
ficios entre el O y 30%. difundan su infección a otros pacientes con igual Meynard J, Meyohas M, Binet D, Chouaid C, Frottier J. Weitz JC, Botehlo R, Bryan R Microsporidiosis en pa­
Los fármacos anticoccidios utilizados en veteri­ patología o con otros compromisos inmunológicos. Pulmonary cryptosporidiosis in the acquired immu­ cientes con diarrea crónica y SIDA, HlV asintomáti­
naria, si bien tienen alguna respuesta en tratamiento nodeficiency syndrome. lnfection 1996; 24:328-3 I cos y pacientes con diarrea aguda. Rev Med Chile
con animales o en cultivos, se han desechado por su Pedersen C, Danner S, Lazzarin A, Glauser M, Weber R 1995; 123:849-56.
toxicidad en humanos. BIBLIOGRAFIA y cols. Epidemiology of cryptosporidiosis among Weitz JC, Tassara R. Diagnóstico de la criptosporidiosis:
Dentro de los fármacos probados en un inicio, la european AIDS patients. Genitourin Med 1996; 72: estudio comparativo de las tinciones Ziehl Neelsen y
espiramicina se vislumbró como el agente de elec­ Balatbat A, Jordan G,Tang Y, Silva J. Detection of Cryp­ 128-31. safranina. Rev Med Chile 1989; I l7:899-902.
ción, pero posteriormente estudios controlados no tosporidium parvum in human feces by nested PCR. J Soave R, Johnson W. Cryptosporidium andlsospora be//i Weitz JC. Detección de antígenos fecales de Cryptospo­
mostraron diferencias con el placebo. Luego se ha Clín Microbio! 1996; 34:1769-72. infections. J Infect Dis 1988; 157:225-9. ridium parv11111 mediante técnica de ELISA. Rev Med
intentado el uso de macrólidos como roxitromicina, Baxby D, Blundell N, Hart C. The development and per­ Tassara R, Weitz JC, Atias A. Evolución de la elimina- Chile 1995; 123:330-33.
eritromicina y azitromicina, esta última ha producido formance of a simple, sensitive method forthe detection
buen efecto en estudios experimentales y existen of Cryptosporidium oocysts in faeces. J Hyg 1984;
algunas comunicaciones aisladas de efecto benefi­ 93:317-23.
cioso en humanos. Benhamou Y, Caumes E, Gerosa Y y cols. AIDS related
Ultimamente se han efectuado tratamientos con­ cholangiopathy, critica! analysis of a prospective se­
trolados con un aminoglicócido oral, la paromo­ ries of 26 patients. Dig Dís Sci 1993;38:1113-8.
micina, con una favorable respuesta clínica y para­ Blackrnan E, Binder L, Gaultier C, Benveniste R, Cecilia
sitológica en más de la mitad de los casos, pero M. Cryptosporidiosis in mv infected patients: diag­
luego de discontinuar el tratamiento los pacientes nostíc sensitivity of stool exarnination, based on num­
recaen. El tratamiento sugerido es 500 mg por 4 berof specimens submitted. Arn J Gastroenterol 1997;
veces al día durante 4 semanas y luego mantención 92:451-3.
con 500 mg 2 veces al día. Recientemente, existe Cella J. Acquired lmmunodeficiency syndrome cholan­
comunicación de tratamiento con paromomicina en gíopathy: spectrum of disease. Arn J Med 1989; 86:
inhalación, con buenos resultados e n 539-46.
criptoporidiosis pulmonares. Current W, Garcia L Cryptosporidiosis. Clín Microbio!
En forma experimental y en humanos se han uti­ Rev 1991; 4:325-58.
lizado tratamientos con factor de transferencia bovi­ Dagan R, Fraser D, El On J y cols. Evaluation ofan enzyme
no, calostro bovino y recientemente, existen ensa­ linked immunoassay far the detection of Cryptospori­
yos con lgG de calostro bovino anti-Cryptos­ dium spp in stool specimens from infants and young
poridium, con resultados aparentemente promiso­ children in fields studies. Arn J Trop Med Hyg 1995;
rios. 52:134-38.
Flanigan T, Whalen C, Tumer J y cols. Cryptosporidium
Prevención infection and CD4 counts. Ann Intem Med 1992;
116:840-2
Los ooquistes de Cryptosporidium parvum han García L, Bruckner D, BrewerT, Schimizu R. Techniques
demostrado, además de gran infectividad, una gran for the recovery of Cryptosporidium oocysts from
resistencia a factores climáticos, detergentes de uso stool specimens. J Clin Microbiol 1983; 18:185-90.
común, desinfectantes y al tratamiento habitual del Greenberg P, Cella J. Treatrnent of severe diarrhea caused
agua para consumo. La prevención debe ser espe­ by Cryptosporidium parvum with oral bovine im­
cialmente importante en grupos cerrados comojardi­ minioglobulin concentrate in patients with AIDS. J
nes infantiles, centros de nutrición infantil y en pa­ Acq lmmun Def Syndr & Hum Retrovir 1996;13:348-
cientes hospitalizados, no sólo para que no la ad- 54.
C/CLOSPOROSJS 153
Capítulo 13

CICLOSPOROSIS
el principal mecanismo parece ser por fecalismo y electrónica. Se demostró cambios histológicos en
(transmisión fecal-oral) desde una persona infecta­ los nueve pacientes infectados, consistentes en in­
da a una susceptible. La forma infectante es el ooquis­ fla!11aci?n ?gud? y crónica, alteraciones de la super­
ANTONIO ATIAS te esporulado. Hasta ahora, no hay indicios de que ficie ep1tehal, diversos grados de atrofia vellocitaria
se trate de una infección zoonótica, puesto que el e hiperplasia de las criptas. El microorganismo se
único hospedero afectado, ha sido el hombre. En encontró en el aspirado duodenal en dos de los
Perú se ha descrito un comportamiento epidemio­ pacientes, pero no fueron confirmados histológi­
lógico similar entre la ciclosporosis y la criptospo­ camente. La patogenia del daño intestinal aún no se
ridiosis (los casos clínicos de ambas entidades se ha establecido.
presentan en la misma época del año y afectan pri­ En ciclosporosis hay evidencias epidemiológicas
Definición. Infección por un coccidio, Cyc/ospo­ /ike body como a coccidian /ike body. El CLB tiene
mariamente a niños de l -2 años de edad), lo cual es que permiten afirmar la existencia de algún grado
ra cayetanensis, que provoca un síndrome diarreico elementos muy similares al Cryptosporidium parvum
sugerente de un mismo mecanismo de transmisión de inmunidad protectora. Ello se manifiesta en la
prolongado en pacientes inmunocompetentes e in­ en relación con su flotación en la solución de
para ambos parásitos. observación de una mayoría de infecciones asinto­
munocomprometidos. Sheather, su afinidad tintorial con el Ziehl-Neelsen
Entre los primeros casos de esta infección apare­ máticas o clínicamente leves en residentes perma­
y lo parecido de la sintomatología. Sin embargo,
cen tres pacientes de Perú (uno en 1985 y dos en nentes de una zona endémica, comparados con la
Biología CLB es más grande (8-10 µm) que el Cryptospori­
I 987) y cuyo diagnóstico se hizo retrospectivamen­ grave sintomatología que pueden producir en los
dium (6 µm), lo que debe obligar a los laboratoristas
te en heces preservadas. Igualmente, se han descrito viajeros ocasionales a esas zonas.
En los últimos años, se ha descrito un síndrome a estar alerta para el diagnóstico diferencial entre
casos de pacientes inmunocompetentes que viaja­
diarreico prolongado, acompañado de anorexia y ambos elementos patógenos (Tabla 13-1).
Un paso decisivo en el conocimiento de este nue­ ron a países en desarrollo o de inmunocomprome­ Sintomatología
gran astenia, en pacientes inmunocomprometidos tidos, especialmente con SIDA. Pero, sin duda el
de países desarrollados y en pacientes inmunocom­ vo agente patógeno se logró con las investigaciones
colaborativas entre la Johns Hopkin University, Balti­
mejor conocimiento de esta nueva entidad clínica La infección por C. cayetanensis puede cursar en
petentes que fueron visitantes o son residentes de se debe a la experiencia recogida en brotes epidémi: forma asintomática, aunque su pro porción en el
países en desarrollo y en cuyas heces se encuentran more, y el Departamento de Parasitología de la Uni­
cos como los ocurridos en Nepal y en Chicago. total de infectados se desconoce. Mientras en los
elementos esféricos, de 8 a I O µm de diámetro (Figu­ versidad Peruana Cayetano Heredia junto a la Aso­
En un hospital de Katmandú, Nepal, se atendie­ pacientes inmunocompetentes la mayor prevalencia
ra 13-1 y Lámina 8) cuya naturaleza ha sido motivo ciación Benéfica PRISMA, del Perú. Ortega y cols.
ron entre mayo y octubre de 1989, más de cincuenta de casos sintomáticos se presenta en niños, en los
de controversia. Se sugirió que este microorganismo establecieron que este agente es un protozoo cocci­
personas que presentaron un síndrome diarreico pro­ pacientes inmunocomprometidos (SIDA) principal­
pu9iera ser una cyanobacteria, un hongo o un coccidio dio, perteneciente al género Cyc/ospora. Estos au­
longado (100%), astenia y fatiga (90%) y anorexia mente ocurre en adultos y en ellos la sintomatología
no esporulado, o un nuevo elemento patógeno. Ba­ tores lograron la esporulación de los CLB preserva­
(86%) y en cuyas heces se detectó CLB. La duración es más intensa y grave.
sado en su morfología y en sus afinidades tintoriales, dos en dicromato de potasio, mediante gradientes
de los síntomas fue de 4 a 107 días (media 43 días), La infección del hombr.e por estos coccidios, tie­
lo que hace dificil su clasificación, se propuso lla­ discontinuas de suerosa y centrifugación, y luego
siendo igual entre los pacientes tratados y aquéllos ne un perfil sintomatológico bien característico.
marlo cyanobacterium-like o coccidian-/ike body indujeron la ruptura mecánica y el desenquistamiento
que no recibieron antibióticos. Al año siguiente, Como pródromos hay sensación de malestar gene­
(CLB). con liberación de los esporozoitos por medio de
hubo un nuevo brote que afectó a 85 pacientes de­ ral y fiebre que dura uno o dos días, seguido de .
Las primeras publicaciones de casos clínicos de tripsina y taurocolato de sodio. Por último, fueron
tectados en el mismo hospital, entre los meses de diarrea líquida explosiva, con 5-7 evacuaciones·
diarrea por CLB, se refieren tanto a cyanobacterittm- fijados para microscopia electrónica. Los hallazgos
mayo y octubre de 1990, con una sintomatología diarias, anorexia, náuseas, dolor abdominal severo
indicaron que se trata de un protozoo coccidio y por
semejante a la descrita. En un esfuerzo para deter­ vómitos ocasionales y gran astenia. La diarrea dur;
tener dos esporoquistes con dos esporozoitos cada
minar la fuente de contagio, se estudiaron diversas tres a cuatro días, pasa espontáneamente y luego de
uno, lo que lo diferencia diametralmente de otros
muestras de agua de bebida y de riego, verduras y algunos días, se repite con iguales características.
coccidios del hombre, se concluyó que correspondía
estiércol de vacuno, y se pudo aislar el parásito en De este modo, la sintomatología se prolonga entre
al género Cyc/ospora (véase Figura 1-5). Estos pro­
lechugas que había consumido un enfermo. tres a cuatro semanas, con estos ciclos de remisio­
tozoos sólo habían sido descritos en reptiles, miriá­
En 1990, en un hospital de Chicago se produjo nes y recaídas. Durante las remisiones de la diarrea
podos e insectívoros, pero sus tamaños son muy
un bro te epidémico del síndrome diarreico provoca­ persiste la anorexia y la astenia, con baja de vario�
diferentes al coccidio aislado del hombre, y de allí la
do por CLB en 20 personas (17 médicos y 3 emplea­ kilógramos de peso.
propuesta de estos autores para considerarlo como
dos) y que duró, con ciclos de remisiones y recaídas, Como se puede observar, la sintomatología de la
una nueva especie de Cyclospora, la Cyclospora
un lapso de 3 a 4 semanas. Esta vez, las fuentes de ciclosporosis es similar a la de los otros coccidios y
cayetanensis. Hasta el presente, se desconoce gran
contagio fueron estanques de agua contaminada. microsporidios intestinales: malestar general y fie­
parte de su ciclo evolutivo y de su epidemiología.
bre de uno a dos días al inicio, síndrome diarreico
Patología lientérico de magnitud y duración variables ten­
Epidemiología
dencia a ser una infección autolimitada e� ;, pa­
Se han efectuado estudios tendientes a determi­ ciente inmunocompetente y prevalente en determi­
Conocida la ciclosporosis como una nueva enti­
nar el daño que pudieran provocar en el intestino nadas épocas del año. Tal vez un hecho distintivo
dad clínica, se le ha descrito con creciente frecuen­
delgado, en nueve pacientes de Nepal infectados de la ciclosporosis, sean los períodos de diarrea más
cia en diversas partes del mundo: Perú, México,
con C. cayetanensis. La endoscopi¡¡ reveló inflama­ prolongados.
Haití, Estados Unidos de América, Nepal, Sudeste
ción del duodeno distal en cinco de los nueve pa­
asiático, Pakistán, India y diversos países europeos
y africanos.
cientes infectados y en ninguno de los controles. Diagnóstico
Además, se obtuvieron muestras de aspirado duode­
Figura 13-1. Ooquiste de Cyclospora cayeta11ensis. (8µm) Si bien se desconocen detalles de su transmisión,
nal y biopsias para estudio por microscopia de luz En muestras de heces frescas no preservadas, los
(I00x).
154 PARAS/TOLOG/A MEDICA C/CLOSPOROS/S 155

TABLA 13-1 durante 7 días. Al tercer día de tratamiento, se detec­ Hart A S, Ridinger MT, Soundarajan R y cols. Novel
COMPARAC!ON MlCROSCOPICA ENTRE CYCLOSPORA, JSOSPORA Y CRYPTOSPORID/UM* tó ciclospora en el 71% de los que recibieron el organism associated with chronic diarrhoea in AIDS.
medicamento y en el l 00% del grupo placebo. Al Lancet 1990; 335:169-70.
Ciclospora Jsospora Cryptosporidit1111 séptimo día, se encontró ciclospora en 1 de 16 pa­ Hale D, Aldeen W, Carral! K. Diarrhea associated with
cientes (6%) tratados con cotrimoxazol y en 15 de Cyanobacteña-like bodies in an immunocompetent
Tama,io (micrones): 8 - 10 20 -23 X JO - 19 4-6 17 (80%) de los que recibieron placebo. Estos resul­ host. JAMA 1994; 271:144-5.
tados coincidieron con la mejoría clínica. Hoge CH W, Shlim DR, Rajah R y cols. Epídemiology of
Aspecto en concentra­ Aspecto morular, grisáceo. • Oval. Habitualmente no No se observan
diarhoeal illness associated with coccidian-like orga­
do de formol-éter: Esférico, refráctil. esporulado en las heces. Prevención nism among travellers and foreign residents in Nepal.
No esporulado en las heces. Lance! 1993; 341:1175-9.
Como la ciclospora es una infección parasitaria Hoge CHW, Shlim DR, Ghimire M y cols. Placebo­
Ooquiste esporulado: 2 esporoquistes ovales, 2 esporoquistes ovales, Esférico o ligeramente
que recientemente se ha estudiado y de la cual se controlled of co-trimoxazole forcyclospora infections
cada uno con 2 cada uno con 4 ovoideo, con 4
desconoce gran parte de su biología y epidemiolo­ among travellers and foreing residents in Nepal: Lancet
esporozoitos esporozoitos. esporozoitos
gía, sólo se puede recomendar las medidas profilác­ 1995; 345:691-3.
ticas relativas a lo que hasta el presente se sabe: Long EG, Ebrahimzadeh A, White EH y cols. Alga
Aspecto con la tincián Acidófilos. Tinción variable, Acidófilos. Esporoquistes se Acidófilos. Tinción
aquéllas que impidan los mecanismos de transmi­ associated with diarrhea in patients with acquired
de Ziehl-Nee/sen: algunos no se tiñen y tiñen rojo intenso. La pared variable. Co¡núnmente
sión facial-oral de la infección. Cuidar de la calidad immunodeliciency syndrome and in travelers. J Clin
aparecen como esporas del ooquiste delimitada por teñidos como eritroci­
precipitación del colorante. tos del agua de bebida y de riego, consumo de verduras Microbio! 1990; 28:11O1-4.
translúcidas.
y frutas limpias, disponer de una adecuada disposi­ Long EG, White EH, Carmichael WW y cols. Morphologic
Negativo Negativo ción de excretas y medidas básicas de educación and staining characteñstics of a cyanobacterium-like
Apariencia bajo luz Autofluorescencia azul
brillante. sanitaria para los manipuladores de alimentos, cons­ organism. J Infect Dis 1991; 164:199-202.
ultravioleta:
tituyen las bases de la protección individual y gene­ Madico G, Gilman RH, Miranda E y cols. Treatment of
Fluorescencia con Pobre Variable Buena. Aparecen como ral. cyclospora withco-trimoxazole. Lancet 1993; 342: 122-
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enteritis of man. Lancet 1993; 341:590-2. parasite (Apicomplexa: Eimeriidae) from humans. J
• Según P.L. Chiodini. Berlín OGN, Novak SM, Porschen RK.. Recovery of Parasitol 1994; 80:625-9.
Cyc/ospora organisms from patients with prolonged Pape JW, Verdier RF, Boncy M y cols. Cyclos¡Íora
diarrhea. Clin Infect Dis 1994; 18:606-9. infectíon in adults infected with HIV. Clínica! mani­
Centers For Disease Control. Outbreaks of diarrheal illnes festations, treatment and prophylaxis. Ann lntem Med
ooquistes de Cyclospora aparecen bajo el microsco­ elementos no esporulados, con una masa central
associated with cyanobacteria (blue-green algae) 1994; 121:654-7.
pio de luz, como esferas no refráctiles, de 8 a 1O morular grisácea que contiene 6 a 9 glóbulos
refráctiles. El ooquiste maduro contiene dos esporo­ like bodies: Chicago and Nepal, 1989 and 1990. Pollok RCG, Bendall RP, Moody A y cols. Traveller's
micrones de diámetro, en cuyo interior se observa
MMWR 1991; 40:325-7. diarrhoea associated with cyanobacteñum-like bodies
una masa morular de glóbulos de aspecto lipídico. quistes con dos esporozoitos cada uno. El examen
rutinario con microscopio de luz no permite la vi­ Connor BA, Shlim DR, Scholej JV y cols. Pathologic in an immunocompetent host. Lancet 1992; 340:556- 7.
En heces preservadas, el contenido se aprecia como
sualización de los esporozoitos dentro de los espo­ changes in the small bowel in nine patients with Shlim DR, Cohen M, Eaton M y cols. An alga-like
gránulos de forma y tamaño irregular. En relación
roquistes, pero este hecho no es esencial para hacer diarrhea with a coccidia-like body. Ann lnter Med organism associated with an outbreak of prolonged
con sus afinidades tintoriales, son refractarios a las
el diagnóstico. El diagnóstico diferencial entre 1993; 119:377-82. diarrhea among foreigners_ in Nepal. Am J Trop Med
tinciones comunes, pero con la tinción alcohol -
Cyclospora, Jsospora y Cryptosporidium ,� resume
Chiodini PL. A "new" parasite: human infection with Hyg 1991; 45:383-9.
ácido resistente (Ziehl-Neelsen) se tiñen de color
Cyc/ospora cayeta11e11sis. Tr�ns R Med Hyg 1994; Taylor DM, Houston R, Shlim DR y cols. Etiology of
rojo intenso o rosado y con la safranina, de color en la Tabla 13-1.
88:369-71. diarrhea among travelers and foreign residents in
naranja. Sin embargo, llama la atención que algu­
Tratamiento Goodgame RW. Understanding intestinal spore-forming Nepal. JAMA 1988; 260:1245-8.
nos elementos se tiñen intensamente y otros lo ha­
protozoa: Cryptosporidia, Microsporidia, lsospora and Wortz R. Cyclospora: a newly identilied intestinal
cen en forma leve o permanecen como quistes hia­
Hoge y cols. han demostrado en un grupo de Cyclospora. Ann lnter Med 1996; 124:429-41. pathogen of human. Clin lnfect Dis 1994; 18:620-3.
linos. Con luz ultravioleta, presentan una fuerte
autofluorescencia. A la microscopia electrónica se personas infectadas con ciclospora y expatriadas
observa una cubierta fibrillar externa y una gruesa desde Nepal, la efectividad del tratamiento por 7
pared celular; el citoplasma está formado por grá­ días con cotrimoxazol. El estudio se hizo en 40
nulos claros y oscuros rodeados por la membrana individuos de los cuales 21 recibieron tabletas de
celular. cotrimoxazol (trimetoprim 160 mg, sulfametoxazol
Los ooquistes son expulsados al exterior como 800 mg) y 19 se le dio placebo, 2 veces al día
11'.
,,,

Capítulo 14

SARCOCISTOSIS 157 ¡_:
11
'\

SARCOCISTOSIS GAMETOGONIA GAMOGONIA


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ALEJANDRO VIOVY
.
(e)
O (d)


l. esporiiqu�tes
.. '.' � -'; _., . ..
inero:iilitos
Definición. Zoonosis parasitaria producida por
coccidios del género Sarcocystis. En medicina hu­
Fase tisular. El hospedero intermediario (cerdo o
vacuno) se infecta al ingerir los esporoquistes pre­ HOMBRE
mana las especies más relevantes son S. sui-homi­ sentes en las heces humanas. Una vez en el intestino
nis y S. bovi-lwminis, que son capaces de realizar
parte de su ciclo de vida en el tracto intestinal del
delgado, se liberan los esporozoitos, penetran la
mucosa y por vía sanguínea alcanzan la microcir­
VACUNO-CERDO (a)
hombre. culación de diversos órganos. A continuación, se
introducen en las células endoteliales en donde se
Biología multiplican rápidamente, hastarepletarlas y destruir­
las, parasitando en forma sucesiva nuevas células
Sarcocystis junto con Toxoplasma son dos géne­ del endotelio. De esta manera, se realizan dos a tres­
ros de coccidios pertenecientes a la familia Sarco­ ciclos de reproducción asexuada.
cystidae. Presentan un ciclo evolutivo heteroxénico Posteriormente, debido probablemente al desa­ MEROGONIA
(Figura 14-1) caracterizado por requerir dos hospe­ rrollo de inmunidad específica, los zoitos resultantes
deros. En el huésped definitivo (predador - carnívo­ se distribuyen en el interior de la musculatura estriada, (b) ESPOROGONIA
ro) se lleva a cabo la reproducción sexuada en la cardíaca y sistema nervioso, procediendo a multipli­
pared intestinal, eliminando formas infectantes para carse lentamente dentro de una vacuola parasitó­ meroiqjtó�
el huésped intermediario (presa), en quien ocurre la fora, constituyendo quistes que contienen cientos y
fase asexuada del ciclo, originando formaciones tisu­ miles de merozoitos. Estas estructuras quísticas tie­ QUISTES
lares infectantes para el predador. La sarcocistosis nen pared propia, son esferoidales o fusi(ormes,
intestinal humana es producida por la ingestión de miden desde 60 µm a varios milimetros de largo, Figura 14-1. Ciclo evolutivo deSarcocyslis sui-hominis y S. bovi-/10111i11is (heteroxénico). Los hospederos intennediarios
quistes viables de S. sui-hominis o S. bovi-hominis están provistos de una cápsula que posee digi­ (cerdo y vacuno) se infectan con los esporoquistes (a) y sus esporozoitos por multiplicación esquizogónica en la
localizados en la musculatura de cerdos o vacunos, taciones externas (citofanéreos) y tabicaciones par­ musculatura esquelética, dan origen a quistes (b) con millares de merozoitos. El hombre (hospedero definitivo) se infecta
respectivamente. Ambas especies tienen ciclos vita­ ciales internas entre los cuales se localizan los pará­ al ingerir carnes con esos quistes; sus merozoitos invaden diversas células de la capa subepitelial del intestino, fonnan -·
les similares. sitos. los gametos (c) y luego los ooquistes in si/u (d), al perder su cubierta, liberan dos esporoquistes que salen al exterior
con las heces.
Fase intestinal. Los quistes ingeridos por el hom­ Epidemiología
bre (hospedero definitivo) contienen millares de me­
rozoitos, los cuales son liberados en el intestino Hasta 1977, tanto la especie S. bovi-hominis como ·sisten aproximadamente 18 días en·condiciones de nis, tal como ocurre en triquinosis, debería ser más
delgado, penetran la mucosa y se introducen en el la S. sui-hominis se denominaban Jsospora hominis, refrigeración (2ºC), pero son destruidos por con­ frecuente en zonas y épocas frías, ya que en estas
interior de diversas células subepiteliales de la lami­ dado que se desconocía cabalmente su ciclo vital y gelamiento a -20ºC o por efecto de temperaturas circunstancias es mayor el consumo de carne de
na propria, diferenciándose en gametos femeninos su potencial zoonótico. Su frecuencia y distribu­ superiores a los 60ºC. cerdo.
(macrogametos) y gametos masculinos (microgame­ ción geográfica y poblacional están determinadas A nivel mundial, la prevalencia de la sarcocistosis Análisis especializados de ganado han determi­
tos). Estos últimos, capaces de moverse por sí mis­ por el grado de fecalismo humano y hábitos alimen­ entérica humana no ha sido estudiada en forma sis­ nado frecuencias bastante elevadas de sarcocistosis
mos, abandonan la célula parasitada y penetran ticios prevalentes en la comunidad, ya que el gana­ temática, puesto que en general, cursa en forma muscular; sin embargo, debe considerarse la factibi­
aqueélla que alberga al macrogameto con el fin de do (bovino y porcino) adquiere la infección produc­ subclínica u oligosintomática y el diagnóstico de lidad de infecciones simultáneas por variadas espe­
fecundarlo y constituir un cigoto, el que posterior­ to de la contaminación de alimentos y aguas de certeza no está exento de dificultades. Recientes cies de Sarcocystis, muchas de las cuales no afectan
mente da origen a un ooquiste compuesto por dos bebida con heces que contienen esporoquistes y el estudios de frecuencia, examinando un número sig­ al hombre. El diagnóstico diferencial es complejo y
esporoquistes, cada uno con cuatro esporozoitos. El hombre se infecta al consumir carne (carnivorismo), nificativo de muestras coprológicas se han realizado se basa en aspectos morfológicos del quiste tisular.
ooquiste, que madura in situ, pierde generalmente su de vacuno o cerdo, cruda o insuficientemente coci­ en Asia, por ejemplo en la región autónoma del Tibet Los éstudios de prevalencia de sarcocistocis se han
cubierta externa al migrar hacia el lumen intestinal. da infectada con quistes tisulares. Los espo­ se observó una frecuencia de 21,8% para S. bovi­ llevado a cabo principalmente en animales sacrifica­
Por esta razón, son los esporoquistes (10-15 µm de roquistes y ooquistes, que no son infectantes para hominis y 7% para S. sui-hominis, en tanto que en dos en matadero. Por ejemplo, se ha constatado
diámetro cada uno) los elementos eliminados en las el ser humano pero sí para los hospederos interme­ Laos S. bovi-hominis fue diagnosticado en el 10% de positividad en cerca del 100% de los vacunos fae­
deposiciones del hospedero definitivo. En la sarco­ diarios, son capaces de permanecer· viables por los casos, cifra muy cercana a la de Taenia sp (12,4%). nados en el sur de Alemania, en tanto que en algunas
cistosis humana el tiempo promedio de excrec_ión de va_rios meses e¡¡ _el ambiente, mientras no sean ex­ No se han detectado diferencias sign_ificativas por provincias del Tibet la frecuencia alcanza aproxima­
esporoquistes (periodo patente) es de aproximada­ puestos a desecación, dosis altas de luz ultravioleta sexo. En cuanto a edad, sería más frécuente en adul­ damente al 60%. Las mayores tasas de infección se
mente 50 días. o temperaturas extremas. Los quistes tisulares re- tos. La frecuencia de sarcocistosis por S. sui-homi- observan en animales más viejos.
l,58 PARASITOLOGIA MEDICA SARCOCISTOS/S 159

contra la musculatura intestinal, originada en una demostración de anticuerpos específicos circulantes pias de los animales, denominadas en conjunto como
condición previa de inflamación del intestino delga­ por hemaglutinación indirecta, inmunofluorescen­ S. lindemanni. En este caso, el ser humano actuaría
do debido a una "infección crónica" por Sarcocystis. cia o ELISA se encuentra aún en evaluación y su como hospedero intermediario accidental, interrum­
Esta secuencia fisiopatológica_explicaria,. al menos uso en la práctica clínica es excepcional. piéndose el ciclo natural, puesto que el hombre no
en parte, lo tórpido, agresivo y poco usual de esta es presa habitual de otros carnívoros. El hospedero
forma de presentación clinica. Tratamiento intennediario normal y el hombre, se infectan al
ingerir esporoquistes contenidos en las heces del
Sintomatología Por tratarse de un cuadro de duración breve y hospedero definitivo (predador); por lo tanto, en
evolución autolimitada, el tratamiento es eminente­ este caso el riesgo epidemiológico de transmisión a
En la gran mayoría de los casos sintomáticos, la mente sintomático, con énfasis en una dieta adecua­ las personas está dado por el fecalismo animal, pro­
infección por S. sui-hominis produce un síndrome da (régimen fraccionado, liviano, blando, sin resi­ bablemente de cánidos y félidos, domésticos y/o
gastrointestinal agudo, inespecífico y de corta dura­ duos) y medidas de sostén, dependientes de la gra­ silvestres.
ción, por lo cual, en la práctica clínica, habitualmente vedad del episodio, orientadas a corregir la deshi­ Hasta el momento, al menos 40 casos han sido
no se logra precisar etiología. dratación y los eventuales trastornos electrolíticos. comunicados en la literatura científica, la gran mayo­
Figura 14-2. Quiste de Sarcocystis hominis en músculo Estudios experimentales en humanos han esta­ En los casos comunicados como enteritis segmen­ ría son hallazgos incidentales en autopsias o biopsias
de cerdo. blecido que, luego de un período de incubación de taria eosinofilica necrotizante por sarcocistosis, el musculares. Los quistes tisulares se localizan en la
6 a 24 horas, se inicia un cuadro de intensidad tratamiento ha sido la resección quirúrgica de la musculatura esquelética y/o cardíaca, hay mínima o
variable, proporcional al número de microorganis­ porción de intestino comprometida. nula reacción inflamatoria, y permanecen posible­
mos infectantes, consistente en dolor y meteorismo mente de por vida. Desde el punto de vista histo­
abdominal, vómitos, diarrea acuosa, febrículas y Prevención patológico, se les ha clasificado en siete grupos
Patología sudoración. Ocasionalmente puede llegar a la des­ morfológicos diferentes y el diagnóstico diferencial
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hidratación e hipotensión arterial. El período de El objetivo es interrumpir el ciclo de transmisión más importante es con los quistes de Toxoplasma
Infecciones experimentales practicadas en volun­ estado dura de 12 a 24 horas, posteriormente, la de esta zoonosis, cuyos factores fundamentales, en gondii.
tarios sólo han demostrado patogenicidad e impor­ sintomatología declina paulatina y espontáneamen­ la infección del hombre y de los animales involucra­ Cursa en forma asintomática, salvo en algunos
tancia clínica para el hombre con la especie S. sui­ te. Dos a tres semanas después, algunos pacientes dos, son el camivorismo y el fecalismo humano, casos en que se ha asociado a miositis focal o gene­
hominis. presentan un síndrome diarreico leve en concomi­ respectivamente. ralizada, manifestada clinicamente como mialgias y
Aunque la patogenia no está totalmente aclarada, tancia con el período de excreción máxima de es­ edema subcutáneo.
se piensa que el principal mecanismo de daño sería poroquistes. Colectiva. La crianza higiénica del ganado, espe­
la destrucción celular, producto de la reproducción cialmente porcino, sin contacto con heces humanas,
sexuada del parásito a nivel del subepitelio intesti­ Diagnóstico es la medida preventiva más importante para evitar BIBLIOGRAFIA
nal. La citólisis estimularla la liberación de mediado­ la infección del hospedero intermediario. Para lograr
res químicos, lo cual explicaría ciertos fenómenos En la anamnesis, el antecedente de ingesta de este objetivo es fundamental una adecuada elimina­ Alías A. El complejo mundo de los coccidios. Parasitolo­
inflamatorios locales observados en la mucosa del carne de cerdo (cruda o insuficiententemente coci­ ción de las excretas humanas. gía al Día 1992; 16:128-34.
intestino. Además, se ha planteado la posible exis­ da), el día previo al inicio de los síntomas, permite La esterilización de las carnes, previo a su expen­ Beaver PC, Gadgil RK, Morera P. Sarcocystis in man: ·A
tencia de una "toxina parasitaria", aún no identifica­ sospechar e investigar oportunamente este agente, dio, ya sea por medio de congelamiento a muy bajas review and report of five cases. Am J Trap Med Hyg
da, que sería la responsable de la intensidad de la generalmente subdiagnosticado.
En el hemograma puede haber poliglobulia relati­
temperaturas o aplicación de radiaciones son efica­
ces, pero demasiado costosas.
1979: 28(5): 819-44.
Boch J, Laupheimer KE, Erber M. Dreí sarkosporidienarten
¡¡
sintomatología, duración del cuadro clínico y del
desarrollo de inmunidad mediada por anticuerpos va a consecuencia de la hemoconcentración secun­ La inspección bajo el triquinoscopio de carnes de bei schlachtrindem in Suddeutschland. Berl Munch
detectables en exámenes serológicos. daria a la deshidratación y leucocitosis como eviden­ matadero no constituye una medida práctica dada la Tierarztl Wonchnschr 1978; 91:426-31.
Los estudios de anatomía patológica son excep­ cia inespecífica de infección aguda. alta frecuencia de infección por otras especies de Bunyaratjev S, Bunyawongwiroj P, Nitiyanant P. Human
cionales y sólo han sido practicados en pacientes El diagnóstico directo se hace en el laboratorio de Sarcocystis que no afectan al ser humano, las cuales intestinal sarcosporidiosis: Report of six cases. Am J
con sarcocistosis grave. Algunas publicaciones des­ parasitología al observar los esporoquistes maduros no son posibles de diferenciar de las potencialmente Trap Med Hyg 1982; 31:36-4 l .
criben casos de enteritis segmentarla eosinofilica y/ u, ocasionalmente, los ooquistes de Sarcocystis, patógenas por la sola observación de los quistes Bunyaratjev S, Unpunyo P . Combined Sarcocystis and
o necrotizante en enfermos que requirieron resec­ mediante el examen coproparasitológico seriado uti­ tisulares, mediante este método. gram positive bacterial infections. A posible cause of
ción parcial del intestino. El análisis histológico de lizando el método de Telemann modificado o, de segmental enterocolitis in Thailand. J Med Assoc Thai
las piezas operatorias mostró abundante infiltrado preferencia, la técnica de flotación en sulfato de zinc. Individual. La medida fundamental es procurar la 1992; 75:38-44.
polimorfonuclear-eosinófilo y, a nivel de la lamina En todo caso, el estudio microscópico de las depo­ ingestión de carne de cerdo o vacuno adecuadamen­ Gibada M, Dilrich O, Scholz T, Viengsay T, Bouaphanh
propria, se observaron estructuras microscópicas siciones sólo se hace positivo a partir de la segunda te cocida. Para lograr y reforzar esta conducta, el S. Current status of food-bome parasitic zoonoses in
parasitarias que fueron interpretadas como una "for­ semana de infección y que la excreción de esporo­ personal de salud debe incorporar esta enseñanza en Laos. Southeast Asian. J Trap MedPublic Heath 1991;
ma de enquístación no convencional" de Sarcocys­ quistes persiste, aunque no exista sintomatología, las actividades individuales y comunitarias de edu­ 22:56-61.
cación sanitaria. 1:
tis. En ciertas áreas ulceradas de la mucosa intestinal por un tiempo cercano a los dos meses. Gutiérrez Y. The tissue apicomplexa: Sarcocystis li11de- 1

se detectó infección secundaria por bacterias gram­ La biopsia intestinal, en aquellos pacientes que 111a11ni and Toxoplasma gondii. En: Gutiérrez Y. Diag­
positivas. Además, se encontró que el 45% de estos han requerido este procedimiento, ha permitido vi­ SARCOCISTOSIS MUSCULARHUMANA noslic Pathology of Parasitic Infections with Clinical
pacientes tenía títulos de anticuerpos antimúsculo sualizar diversos estadios.evolutivos de este coccidio, Correlations; EEUU: Lea & Febiger, 1990: 108-2.
liso significativamente elevados, lo que, según los fundamentalmente á'nivel de la lamina propria. Corresponde a la histoparasitosis del hombre pro­ Herbert IV, Sniiih TS. Sarcocystosis. Parasitology Today
autores, correspondería a una respuesta autoinmune La utilidad del diagnóstico indirecto mediante la ducida por diversas especies de Sarcocystis pro- 1987; 3:16-21.
PARASITOLOG!A MEDICA Capítulo 15
Rommel M, Heydom AO. Beitraege zum lebenszyklus Subercaseaux B. Sarcocistosis. En: Alías A. Parasitología
der sarkosporidien. Berl Munch Tierarztl Wochenschr Clínica. 3� ed. Santiago-Chile: Editorial Mediterrá­
BLASTOCISTOSIS
1972; 85:143-45. neo, 1991: 157-59. MARISOLDENEGRI
. 1

Straka S, Skracikova J, Konvit !, Szilagyiova M, Micha! Yu S. Field survey of Sarcocystis infection in de Tibet
L. Sarcocystis species in vietnamese workers. autonomous region. Chung Kuo I Hsueh Ko Hsueh
Cesk Epidemial Mikrobiol Imunol 1991; 40:204-8. yuan Hsueh Pao 1991; 13:29-32.

Definición. Infección producida por un protozoo también presente en muestras fecales. En algunas
de controvertido poder patógeno, el Blastocystis infecciones, la forma amiboide puede ser la única
hominis que habita el intestino del hombre y de otros observada en deposiciones simulando a veces,
animales (monos, simios, cerdos, conejos, caballos, leucocitos fecales (fácilmente diferenciables con al­
etc.). La infección ha sido asociada principalmente a gunas tinciones).
sintomatología gastrointestinal inespecífica, tanto
aguda como crónica, existiendo también casos de Forma granular. Presenta gran cantidad de mito­
presentación asintomática. condrias Jo que les otorga un aspecto granular. Pue­
de ser observada en muestras clínicas y cultivos
Biología especialmente maduros.
Las formas amiboides y granular derivan de la
Descrito ya en 1911 por AlexieffcomoB/astocys­ forma vacuolada.
tis enterocola y en 1912 por Brumpt como Blasto­
cystis hominis, fue clasificado como levadura no Epidemiología
patógena, cuya importancia radicaba principalmente
en el diagnóstico diferencial de patógenos intestina­ Su transmisión es fecal-oral, incluyendo agua y
les. Posteriormente, un mayor conocimiento de su alimentos contaminados. Es así como su prevalencia
fisiología y estructura llevan a clasificarlo en 1967 va estrechamente ligada a malas condiciones de sa­
como protozoo y a ubicarlo dentro del phylum Sar­ neamiento básico, hacinamiento y malnutrición.
comastigophora (1985) y un nuevo subphylum La frecuencia de infección en diferentes comuni­
Blastocysta, orden Blastocystida y género Blasto­ dades, varía ampliamente. En zonas tropicales es
cystis (1993). donde alcanza su mayor prevalencia, llegando a ci­
Son células esféricas de tamaño variable 4-15 µm, fras de 20- 50% de infección, solo o asociado a otros
multinucleadas, anaerobias estrictas, con gran can­ protozoos intestinales patógenos y comensales. En
tidad de mitocondrias y otros organelos citoplasmá­ otros países se han reportado prevalencias entre 2 - ·
ticos. Poseen pseudopodios de locomoción y de 18%. En Chile se ha encontrado alrededor de 10% de
alimentación. Se multiplican principalmente por fi­ la población infectada con B. hominis, cifra que
sión binaria, pero también por endiodogenia, esqui­ aumenta en poblaciones rurales a 30%.
zogonia y plasmotomía. No se han descrito formas Estudios realizados en diversos grupos etarios
quísticas, no se conoce su ciclo evolutivo ni de la demuestran que la infección por B. hominis, presen­
existencia de hospederos intermediarios. ta una mayor prevalencia en la edad escolar y dismi­
Presenta tres formas morfológicas diferentes: nuye a medida que aumenta la edad, para volver a ser
vacuolad_a, granular y amiboide. más prevalente en el adulto mayor. Este comporta­
miento también ha sido observado en protozoos
Forma vacuolada. Mide alrededor de 8-1O µm de comensales del intestino como Entamoeba coli y
diámetro. Presenta una gran vacuola. central que Endolimax nana.
ocupa 50-95% de la célula y restringe al citoplasma No se han reportado diferencias por sexo, pero sí
a una banda periférica que contiene la mayoría de los una mayor tasa de infección en hombres homosexua­
organelos citoplasmáticos. La vacuola central esta­ les, alcanzando cifras tres veces mayores al resto de
ría relacionada con la multiplicación esquizogónica. la población.
La forma vacuolada es la predominante en el tracto
gastrointestinal (Lámina 9). Patología

Forma ameboide. Célula polimorfa con gran rango Poco se conoce sobre su patogenia, en animales
de tamaño, presencia de pseudopodios y de activi-· de experimentación se ha observado hiperemia de la
dad fagocítica. Es la.forma predominante en cultivos, mucosa cecai;-pos·terior a la infección por B. hominis
'I1,

¡¡,
162 PARASITOLOGIA MEDICA BLASTOCISTOSIS 163

desarrollada por inoculación intracecal con cultivos. asintomáticos con un número menor de B. hominis metronidazol en dosis de 750 mg c/8 h durante 5 Parasitol Today 1993; 9:2-3.
El estudio microscópico en estos casos, reveló pe­ en deposiciones. días es la más utilizada cuando el tratamiento es Kappus K, Lundgren R, Juranek D y cols. Intestinal
netración de B. hominis al epitelio, pero sin sobrepa­ Los pacientes con infección VIH presentan ma­ requerido; aunque algunos autores sugieren que la parasitism in the United States: Update on a continuing
sar la lamina propria que se aprecia con aumento de yor tasa de infección y aunque algunos autores han erradicación de B. lzominis con metronidazol seria problem. Am J Trap Med Hyg 1994; 50:705-13.
celularidad. asociado cuadros más sintomáticos en estos pacien­ similar a la que ocurre en forma espontánea. Otras Lojar J, Andlovic A, Poljsak-Prijately M. Incidence of
En humanos sintomáticos, varios autores han des­ tes, esto no es ampliamente compartido ya que en la alternativas de tratamiento son emetina, dehidro­ 8/astocystis hominis in patients with diarrhoea. J lnfec
crito alteraciones endoscópicas con eritema y fria­ mayoría de los casos existe la presencia de otros metina, iodoquinol, furazolidona, paromomicina y 1994; 28:151-4.
bilidad de la mucosa colónica y del íleon, además de patógenos involucrados. Su tratamiento en estos cotrimoxazol. Sapunar J. Algunas consideraciones sobre Blastocystis ho­
alteraciones histológicas que demuestran diversos· pacientes es recomendado sólo ante la persistencia minis. Parasitol al Día 1990; 14:83-5.
grados de inflamación. Sin embargo, estos hallazgos de síntomas una vez descartadas otras etiologías, Sheehan D, Raucher BG, Mcitrick J. Association of Blas­
han sido cuestionados por estudios posteriores que incluso con métodos endoscópicos. BIBLIOGRAFIA tacystis /10111i11is with signs and symptoms of human
no demostraron evidencias significativas de inflama­ Los diversos estudios clínicos sugieren que B. disease. J Clin Microbiol 1986; 548-50.
ción intestinal endoscópicas (colonoscopia y hominis puede estar asociado a sintomatología gas­ Albrecht H, Stellbrink HJ, Koperski, Greten H. B/astacys­ Vannatta J, Adamson D, Mullican K. Blastocystis hominis
endoscopia) ni histológicas en pacientes sintomáti­ trointestinal aguda y crónica, pero su papel como tis haminis in human immunodeficiency virus related infection presenting as recurren! diarrhea. Ann Intest
cos en los cuales se había descartado otros patóge­ agente etiológico de enfermedad no está actualmen­ diarrhea. Scand J Gastroenterol 1995; 30:909-14. Med 1985; 102:495-6.
nos intestinales. Como también se demostró norma­ te definido. Arrnentia A, 'Méndez J, Gómez A, Sánchez E, Fernández Volkow M, Markell E. Blastocystis hominis: Prevalencein
lidad en estudios funcionales para evaluar la indem­ A,De la Fuente R, Sánchez P. Urticaria by Blastacystis asymptomatic versus symptomatic hosts. J lnfDis 1993;
nidad de la mucosa. Diagnóstico hominis successfull treatment with paramonycin. 168:242-44.
No se han descrito formas intracelulares como Allergol et Immunopathol 1993; 21:149-51. Zierdt CH, Tan H. Endosymbiosis in Blastocystis homi­
tampoco evidencias suficientes de invasión de teji­ El diagnóstico se efectúa principalmente con el Ashford B, Atkinson E. Epidemiology of Blastocystis nis. Exp Parasitol 1976; 39:422-30.
dos en humanos (sólo un caso que sugiere disemi­ examen parasitológico seriado de deposiciones con Jwminis infection in Papua New Guinea: Age-pre­ Zierdt CH. Blastocystis hominis, a long misunderstood in­
nación en sinovitis por B. hominis). las técnicas de concentración habituales, identifi­ valence and associations with otherparasite. Ann Trop testinal parasite. Parasitol Today 1988; 4:15-7.
cando principalmente su forma vacuolada. Med Parasitol 1992; 86:129-36. Zierdt CH,Donnolley C, Muller J y cols. Biochemical and
Sintomatología El diagnóstico microscópico no es fácil debido a. Biolley MA, Obrg C. Blastocystis infeétion in symptomatic ultrastructural study of Blastocystis ho111i11is. J Clin
la variedad de formas y de tamaño de B. hominis, por patients al the Regional Hospital of Temuco, Chile. Microbio! 1988; 26:965-70.
Inicialmente descrita como levadura apatógena, Jo cual debe ser realizado por personas entrenadas. Bol Chile Parasitol 1993; 48:25-7. Zierdt CH. Blastocystis hominis. Past and future. Clin
ya desde 1926 aparecen algunas publicaciones ais­ Puede utilizarse también preparaciones teñidas con Grossman Y, Weiss L, Simon D, Tanowitz H, Wittner M. Microbio! Rev 1991; 4:61-79
ladas que atribuyen un papel patógeno en humanos. tinción tricrómica . Blastocystis hominis in Hospital Employees. Am J Zuckerrnan M, Watts M, Ita H, Meriano F. B/astocystis
Esto ha adquirido importancia creciente en los últi­ Debido a que diversas publicaciones han asocia­ Gastroenterol 1992; 87:729-32. haminis infection and intestinal injury. Am J Med Sci
mos años en que comunicaciones de B. hominis do su importancia clínica al número de B. hominis Jian IB, He JG. Taxonomic status of Bldstocystis hominis. 1994; 308:96-101.
asociado a patología gastrointestinal han ido en au­ por campo 40x, algunos autores recomiendan su
mento. Sin embargo, también han aparecido un sin­ informe para orientar al clínico a una conducta tera­
número de artículos que niegan esta asociación, sien­ péutica. -B. lzominis también puede ser encontrado
do hasta hoy un protozoo cuyo poder patógeno es con un alto rendimiento en improntas de mucosa
discutido. intestinal (colon e íleon) en pacientes que son some­
La sintomatología clínica asociada a la infección tidos a endoscopias y biopsias. En casos aislados se
por B. hominis incluye náuseas, vómitos, dolor ab­ ha obtenido muestras positivas para B. hominis en
dominal, flatulencia, diarrea acuosa, tenesmo, cons­ jugo duodenal.
tipación, prurito anal, baja de peso, malestar general, Ocasionalmente se requiere de técnicas como cul­
anorexia, fiebre y en ocasiones, pérdida de sangre en tivos en heces que son rápidamente positivos des­
deposiciones. En algunos casos puede encontrarse pués de 24 horas. También se ha utilizado técnicas
eosinofilia'leve de 4-12% asociada. inmunológicas para determinar antígenos de B. lzo­
La infección sintomática frecuentemente es auto­ minis en heces mediante inmunofluorescencia.
limitada y se resuelve en uno a tres días, sin requerir
terapia específica. Pero algunos casos también han Tratamiento
sido asociados a diarrea crónica de varias semanas
de evolución. En la mayoría de los casos, la sintomatología es
Ocasionalmente se Je ha atribuido alguna relación autolimitada a pesar de continuar infectados con B.
en otros síntomas extradigestivos, como urticaria hominis. En otros casos también ocurre erradicación
crónica y sinovitis. de la infección, sin tratamiento específico. El trata­
Al igual que otros protozoos con papel patógeno, miento estaría indicado sólo ante la persistencia de
la aparición de enfermedad dependería de la interac­ sintomatología, habiéndose descartado la presencia
ción entre parásito y hospedero. Es así como se ha de otros patógenos que pudieran explicar e_l cuadro
asociado la sintomatología digestiva con un mayor digestivo.
número de B. hominis encontrado en deposiciones Diversas drogas antiprotozoarias han sido utiliza­
(mayor o igual a 5 por campo 40x) y a cuadros das en el tratamiento de estos pacientes. De ellos,
� Capítulo 16 ASCARIASIS 165

ASCARIASIS largo, y baja por el tubo digestivo regresando a su


punto de partida, el duodeno. En el intestino delgado
La presencia de ascariasis en un territorio se rela­
ciona fundamentalmente con sus caracteristicas
RENZO TASSARA continúa su crecimiento hasta llegar al estado adul­ biogeográficas, teniendo especial importancia las
to; entonces, los machos fecundarán a las hembras y condiciones climáticas, la calidad de los suelos y la
éstas iniciarán la postura de los huevos aproximada­ contaminación fecal del ambiente, ligada esta última
mente entre la octava y decimosegunda semana des­ a factores socioculturales y económicos.
pués de la infección (período prepatente). Los climas húmedos y lluviosos, templados o
En su hábitat, el lumen del intestino delgado, el cálidos, son más favorables al desarrollo de esta
parásito adulto se mantiene en constante movimien­ parasitosis, oscilando la temperatura ideal entre los
Definición. Geohelmintiasis causada por el As­ un par de espículas copulatorias de 2 a 3 mm de to para no ser arrastrado por el peristaltismo intesti­ 22ºC y los 33ºC para una maduración más acelera­
caris /umbricoides, nematodo que se encuentra am­ longitud. La hembra presenta una vulva en la unión nal, existiendo sólo una relación de contigüidad con da del huevo. Las temperaturas más bajas retardan
pliamente distribuido en el mundo, principalmente del tercio anterior con el tercio medio, continuada la pared del tubo digestivo. Su longevidad llS de un o detienen su desarrollo. Los lugares de escasa hu­
en regiones húmedas, tropicales y templadas, afec­ por la vagina, un útero doble, oviductos y ovarios. año, pero puede llegar a vivir hasta veinte meses. medad y excesivo calor, matan al huevo por deseca­
tando preferentemente a los niños. Se localiza en el Se calcula que puede contener 27 .000.000 de hue­ ción, a diferencia de los húmedos y sombrios, donde
intestino delgado donde puede permanecer en forma vos, con una oviposición diaria entre 200.000 a Epidemiología puede sobrevivir durante varios años.
asintomática, o bien producir cuadros digestivos 240.000 huevos. Los huevos fecundados son de sec­ La calidad del suelo juega un papel importante,
inespecíficos, alteraciones de la nutrición y también ción elíptica, miden 45 a 75 µm de largo y 35 a 50 Presenta una amplia distribución geográfica, afec­ ya que los arcillosos facilitan el desarrollo del hue­
graves complicaciones con riesgo vital. µm de ancho; presentan una gruesa cubierta protec­ tando a más de mil millones de seres humanos (20% vo, mientras que los ricos en humus vegetal son
tora compuesta por tres capas; la más interna es la de la población mundial). menos favorables y los arenosos le son adversos.
Biología membrana vitelina, de composición lipídica, inerte En los países más desarrollados como Estados Si bien los factores descritos se correlacionan
y relativamente impermeable, encargada de impe­ Unidos, Canadá y Europa occidental, se presenta estrechamente con la prevalencia de las ascariasis, e
El Ascaris lumbricoides es el nematodo intestinal dir el ingreso de sustancias tóxicas para el embrión; sólo en casos aislados, mientras que en otros como incluso existe sincronización de ésta con los cam­
de mayor tamaño que afecta al hombre. De color luego presenta una capa media, gruesa y transparen­ China, estudios recientes estiman la población infec­ bios estacionales, no existen reglas absolutas y la
blanco o rosado nacarado, sus extremos son aguza­ té y, finalmente, una capa externa albuminoidea, de tada en aproximadamente 500 millones de personas. distribución del parásito no es homogénea dentro de
dos correspondiendo el anterior a una boca triangu­ superficie mamelonada y teñida de color café por Alcanza una mayor prevalencia en menores de un mismo territorio, encontrándose prevalencias muy
lar, con tres labios carnosos finamente dentados. Dos los pigmentos biliares (Figura 16-2 y Lámina 10). edad, aparentemente más relacionado a los hábitos variables en informaciones obtenidas de diferentes
estrías laterales recorren su cuerpo en sentido longi­ Las hembras no fecundadas ponen huevos infértiles, higiénicos más precarios a corta edad, que a una grupos. En el estado hindú de Mahorashtra, once
tudinal. La hembra mide 25 a 35 cm de largo y 3 a que son más largos que los fecundados (90 x 40 µm) causa inmunitaria y compromete a ambos sexos por estudios sobre 126.535 individuos, mostraron fre­
6 mm de ancho. El macho es de menor tamaño, y no presentan la membrana vitelina interna. igual. cuencias entre 8 y 90,6%. En preescolares de Ghana
habitualmente entre 15 a 30 cm de largo y 2 a 4 mm El huevo, al ser eliminado en las deposiciones, no
de ancho y presenta su extremo posterior enroscado está aún segmentado y sale al medio externo en for­
ventralmente, a diferencia de la hembra que termina ma inmadura. Su desarrollo dependerá de las carac­
en forma recta (Figura 16-1). El sistema reproductor teristicas' de las condiciones ambientales. Si la tem­
está muy desarrollado y ocupa los dos tercios poste­ peratura, humedad, calidad del suelo y sombra son
riores del parásito. En el macho el aparato genital adecuados, se desarrollará en el interior del huevo
está compuesto por un largo túbulo muy enrollado y una larva móvil, que muda al menos una vez, gene­
tortuoso, con testículos, conductos deferente y efe­ rando así un huevo larvado o infectante en el lapso
rente que se abre en una cloaca subterminal, junto a habitual de tres a cuatro semanas. El tiempo mínimo
requerido para el desarrollo completo en condicio­
nes óptimas es de dieciocho días.
El hombre se infecta al ingerir estos huevos (Fi­
gura 16-3) y en el estómago.o más frecuentemente
en la porción alta del intestino delgado, emerge de
ellos una larva (de 260 x 14 µm). La larva penetra
activamente la mucosa intestinal y cae a la circula­
ción portal, llegando al hígado y luego al corazón
derecho, siendo impulsada al pulmón, donde queda
atrapada en lo capilares del intersticio pulmonar,
lugar donde continúa su maduración y crecimiento
hasta romper el endotelio capilar y tabique alveolar.
Entre el noveno y decimoquinto día de la infección,
cae al interior del alvéolo e inicia una migración · · .. :_:,,
Figura 16-1. Ejemplares adultos deAscaris /umbricoides. ascendente por el árbol respiratorio hasta llegar a la .9
Los machos se distinguen p_or su menor tamaño y por su tráquea, franquea la_epiglotis y al pasar a la faringe
extremidad posterior encorvada. es deglutida esta larva, que ahora mide 1,2 mm de Figura 16-2. Huevos de Ascáris /11111bricoides. (Á) Huevo recién iimÍ"n'ado. (B) Huevo decorticado. (C) Larva
emergiendo del huevo. (D) Larva libre.
T
1
i
166 PARASITOLOGIA MEDICA ASCARIASIS 167

Intestino delgado se han comunicado recientemente prevalencias des­ nadas probablemente por la ingestión de vegetales
Aéiuiigs_, de 76 a 0%. Esta distribución errática e impredeci­
ble, si bien se puede explicar, en parte, por diferen­
contaminados, importados de países con endemia, y
también por la existencia demostrada de infección
cias entre los "grupos de investigadores y selección cruzada, aunque infrecuente con Ascaris smmz del
en el muestreo, se debe a que, además, intervienen cerdo, morfológicamente indistinguible de Ascaris
otros factores como la ruralidad, falta de educación, lwnbricoides.
malas condiciones higiénicas, costumbres nutricio­
nales, falta de agua potable, presencia de vectores Patología
mecánicos, desnutrición y otros, todos ellos favore­
Intestino cedores de la presencia e intensidad de la infección. El amplio rango de efectos que puede producir la
delgado Mención aparte merece la contaminación fecal de ascariasis en las diferentes etapas de su ciclo, ade­
HOMBRE los suelos, ya que la presencia de este parásito es más de la frecuente asociación con desnutrición y
FECALISMO proporcional a la mala disposición de excretas, riego otras parasitosis, hace que sea dificil definir los da­
AMBIBNTE con aguas servidas y uso de excremento humano ños y consecuencias atribuibles exclusivamente a
como fertilizante en la agricultura. ella.
En Sudamérica se estima que hay más de cien Si bien la infección por un solo ejemplar de A.
millones de personas infectadas por Ascaris. Brasil lumbricoides puede producir diversas complicacio­
muestra altas tasas de infección en todo su territorio, nes, que de no ser tratadas en forma urgente pueden
especialmente en la región amazónica, donde se han incluso conducir a la muerte, lo habitual es que la
observado frecuencias de 65% a 97%, las más altas presencia de síntomas o daño evidente se correlacione
del país. En las zonas litorales, calientes y húmedas, en forma directamente proporcional al número de
la prevalencia es algo menor; en cambio, en escola­ helmintos que infectan al individuo y también a las
res de grandes centros urbanos en el sur, la para­ condiciones del paciente (edad y estado nutricio­
sitación encontrada es del orden del 40%. nal).
Chile; con un número de infectados estimados Durante la migración de las larvas de áscaris por
en 423.279, muestra claramente la relación que el pulmón (Figura 16-4), éstas rompen los capilares
existe con el ambiente y el clima. En el norte del pulmonares, paredes y tabiques alveolares, ocasio­
país, que es una región desértica, muy seca, de sue­ nando focos de microhemorragias. Por otra parte, se
los arenosos, temperaturas elevadas y escasa som­ desarrolla una respuesta inflamatoria toxialérgica que
bra, la frecuencia de ascariasis es menos de 0,3%. será proporcional al número de larvas en migración
Al avanzar hacia el sur del país, la humedad va en y a la existencia de infecciones anteriores que hayan
aumento, aparece una vegetación cada vez más fron­ sensibilizado al paciente. Se observan infiltrados
dosa, la temperatura se hace templada, hay abun­ linfoplasmocitarios y eosinofilicos en tabiques y · ·
dante sombra y los suelos son arcillosos o ricos en alvéolos, con congestión y exudado que se visualiza
humus vegetal, con lo que las frecuencias de radiológicamente como infiltrados intersticiales
ascariasis van creciendo hasta sobrepasar el 20% migratorios y se manifiesta clínicamente como una
entre la latitud 37º N y 43º S; incluso en algunas neumonitis asmatiforme.
localidades puntuales en esta zona, la infección En el intestino, el parásito se mantiene en el
bordea el 50%. Más al sur, la frecuencia nuevamen­ lumen intestinal en una constante lucha contra el
te disminuye progresivamente a menos del 1 % ya
que las temperaturas se hacen extremadamente frías.
Algunos países que presentaban prevalencias muy
elevadas, han logrado reducirlas en forma conside­
rable gracias a laboriosos programas de largo plazo.

--=---- t"'º�·.�-----
Destaca entre ellos el Japón, que en el período pos­
terior a la segunda guerra mundial, llegó a tener una
o
infección superior al 60%, favorecida por las pési­
00� mas condiciones sanitarias y nutricionales propias
de un país derrotado. Mediante campañas educati­
vas, tratamientos en masa y saneamiento ambien­
tal, el Japón, en el lapso de 30 años, ha llegado

®-@-� prácticamente a erradicar la ascariasis, con una pre­


valencia en la década del 80 inferior al O,1 %.
. En algunos países con buen saneamiento y alto , :: .

nivel de vida como Inglaterra, Suecia y Canadá, Figura 16-4. Sección de larva de áscaris durante la
Figura 16-3. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión del Ascaris /wnbricoides. presentan casos esporádicos de esta infección, origi- migración pulmonar.
1.68 PARASITOLOGIA MEDICA
_.·""r_l. ASCARIASIS 169
i
1
1 En la fase intestinal de la ascariasis, frecuente­
mente los síntomas no se presentan o son vagos y
tienden a la cronicidad. Se les ba sistematizado, se­
gún el tipo de molestias, en:

Generales: anorexia, disminución de la ingesta,


baja de peso, retardo del desarrollo pondoestatural
y desnutrición en niños.

Intestinales: dolores de tipo cóliéo, náuseas,


vómitos ocasionales, diarreas recidivantes y meteo­
rismo.
A B
Figura 16-6. Obstrucción intestinal por Ascaris /umbri­ Nerviosos: mal dormir, irritabilidad y convulsio­
coides en un niño de dos años. Con el tratamiento eliminó nes en pacientes con predisposición de base.
601 ejemplares. (Caso del Dr. Carlos Pérez B., Chile).
Alérgicos: urticarias, pr:urito nasal o anal y bron­
tos y sobrepoblación de helmintos, penetrando en quitis asmatiforme.
conductos como el colédoco o Wirsung, donde Si el número de A. l11mbricoides es muy grande,
produce ictericias obstructivas, colecistitis, colan­ la sintomatología será más intensa, pudiendo llegar
gitis, abscesos hepáticos y pancreatitis aguda (Fi­ a obstruir el lumen intestinal, lo que genera un cua­
guras 4-3, 16-5, 16-6 y Lámina 11). dro de abdomen agudo en el que se puede palpar el
También puede atravesar la pared intestinal por ovillo de gusanos como una masa intestinal. El pa­
sitios de menor resistencia como son las suturas rásito puede dar otras complicaciones de igual gra­
operatorias y divertículos,. causando una peritonitis. vedad al atravesar la pared intestinal por lugares de
Además, se ha descrito el ascenso por el tubo diges­ menor resistencia (suturas quirúrgicas y divertículos),
Figura 16-5. Complicaciones de la ascariasis. (A) y (B) Obstrucción intestinal. (C) y (D) Migración al conducto colédoco tivo, pasando a la vía respiratoria y produciendo produciendo peritonitis; al migrar a conductos como
y producción de abscesos piógenos del hígado. (Caso A del Dr. Atías; casos B, C y D, cortesía del Dr. Rodolfo Céspedes, asfixia. También se ha comunicado su paso al intes­ la vía biliar, provocan ictericia obstructiva, colecis­
Costa Rica). tino grueso y su penetración en el apéndice, evolu­ titis, pancreatitis y abscesos hepáticos. También
cionando corno apendicitis aguda y su localización pueden penetrar en apéndice y divertículos, gene­
en la vesícula. Es frecuente la eliminación de áscaris rando apendicitis y divertículitis. Su ascenso por el
peristaltismo, sin dañar en forma directa la pared del El peso total del intestino de los cerdos parasitados por la boca o la nariz, además del ano. tubo digestivo y aspiración al árbol traqueobronquial,
tubo digestivo. se encuentra aumentado en relación a los animales produce obstrucción parcial o total de la vía respira- · ·
Se ha observado que, tanto en infecciones huma­ con parasitación escasa o ausente, el cual se produ­ Sintomatología toria.
nas por A. lumbricoides como en modelos experi­ ce a expensas de una hipertrofia de la capa muscular
mentales de cerdos infectados con A. s1111m, existe del intestino. La ascariasis evoluciona en la rnayoria de los Diagnóstico
una disminución de la incorporación del nitrógeno Se ha aislado un péptido proteolítico, con activi­ casos en forma totalmente asintomática o con esca­
proteico aportado en la dieta, aumento de la pérdida dad antitripsina y antipepsina que se ha denominado sos síntomas vagos, principalmente de tipo digesti­ Durante el estadio pulmonar de la ascariasis, se
fecal de nitrógeno, menor incremento de peso con ascarasa, cuya función probablemente es la de co­ vo. La intensidad del cuadro clinico se correlaciona debe plantear la sospecha diagnóstica en todo en­
respecto a grupos controles no parasitados, menor laborar en la protección de áscaris contra la diges­ con el número de parásitos presentes, la edad del fermo con antecedentes de ascariasis, eosinofilia
absorción de grasas y pérdidas aumentadas de éstas tión enzimática intestinal. paciente, su estado nutricional y la presencia de elevada, concomitante a un síndrome respiratorio
en las deposiciones sin llegar a una esteatorrea clí­ Las alteraciones nutricionales son más evidentes otras patologías concomitantes. generalmente obstructivo, fiebre con escasa o mala
nica, déficit sintomático de vitamina A, actividad en relación directa a la cuantía de la infección y en En la gran mayoría de los casos, al pasar por los respuesta a los antibióticos y que radiológicamente
lactásica disminuida y menor tolerancia a la lactosa, relación inversa a la edad del paciente y a su estado pulmones, las larvas no producen manifestaciones, muestra sombras pulmonares cambiantes en el tiem­
prueba de D-xilosa alterada y finalmente, la ingesta nutricional previo. Una infección con veinticinco ejem­ o sólo se presenta como una bronquitis banal, pero po (síndrome de Liieffer). El diagnóstico raramente
alimentaria también está disminuida en los grupos plares deA. l11mbricoides implica una pérdida proteica en casos de infecciones muy repetidas en el tiempo se puede confirmar al encontrar larvas en el esputo
infectados. Todas estas alteraciones se mejoran com­ fecal de cuatro gramos diarios sólo por la producción y por un gran número de larvas, el paciente estará o en el contenido de lavado gástrico. Este s[ndrome
pletamente después de efectuar un tratamiento de los huevos, lo cual tendrá repercusiones severas altamente sensibilizado y puede presentar cuadros puede ser producido también por otras helmintosis,
medicamentoso específico para la ascariasis. La ac­ si el infectado es un niño pequeño, desnutrido y con respiratorios severos, con tos seca o productiva, en cuyos ciclos las larvas también deben migrar por
tividad de rnaltasas y sucrasas no se encuentra alte­ bajos aportes proteicos en su dieta. intensa disnea, fiebre moderada, signología obstruc­ el. pulmón, como son la uncinariosis y estron­
rada en esta parasitosis. La ascariasis también puede producir daño me­ tiva (sibilancias, roncus) y eosinofilia transitoria (sín­ giloidiosis (véase el Capítulo 48: Parasitosis del
El examen histopatológico del intestino de los cánico, ya sea al existir una infección muy cuantio­ drome de Loeffler). Si existe espectoración, es carac­ pulmón).
cerdos y de biopsias en humanos, demuestra acor­ sa que puede llevar a una obstrucción intestinal terístico encontrar en ella un elevado número de Una vez que el parásito ha llegado a su etapa
.tarnie_nto de las microvellosidades, elongación de las por un ovillo.de A. illmbricoides, o.por el hecho.de eosinófilos y cristales de Charcot-Leyden, además adulta en el intestino, la cantidad. de huevos que
criptas, disminución de la relación cripta-vellosidad que este parásito tiende a migrar bajó ciertos ·éstímu­ de larvas del parásito, pero estas últimas son más cóloca diariamente cada hembra es tan elevada, que

!
e infiltrados linfoplasmocitarios de la lamina propria. los como son el alcohol, fiebre elevada, medicamen- fáciles de recuperar por lavado gástrico. el diagnóstico mediante el examen microscópico de

1
170 PARASITOLOGIA MEDICA ASCARIASJS 171

Tratamiento ser asociada al pirantel por existir antagonismo entre Denham DA. Ascaris lumbricoides in english school
ambos medicamentos. Su empleo está proscrito en children. Trans R Soc Trap Med Hyg 1984; 78: 566-
Si bien existen numerosos fármacos contra la pacientes epilépticos y con insuficiencia renal o 7.
ascariasis, muchos de ellos han sido dejados de hepática. Felice C, Marchi L, Meloni, Pabruno SF, Capellini R,
lado en favor de los que presentan menor toxicidad, Los efectos adversos de estos medicamentos y las Bruno R. Ultrasound in ·the diagnosis of gallbladder
además de una alta efectividad. Actualmente, los dosis terapéuticas recomendadas se describen, en el ascariasis. Abdom lmaging 1995; 20:320-2.
medicamentos de elección son los derivados Capitulo 66: Tratamiento de las parasitosis y tablas Gómez Morales MA, Atzori C, Ludovici A, Rossi P y
benzirnidazólicos (mebendazol y albendazol, terapélllicas. cols. Opportunistics and non-opportunistic parasites
principalmente), el pamoato de pirante! y las sales in HIV-positive and negative patients with diarrhoea
de piperazina. Prevención in Tanzania. Trap Med Parasitol 1995; 46:109-14.
Los derivados benzirnidazólicos, de amplio es­ Hayshi S, Suemitsu T, Kunii C. Programa de control de las
La endemia de la ascariasis se relaciona con la
pectro sobre los nematodos, son muy bien tolerados contaminación fecal de los suelos y aguas, por lo helmintiasis transmitidas a través del suelo en Japón.
y altamente efectivos. Producen una desaparición de Bol Chil Parasitol 1981; 36:2-5.
que el control de esta parasitosis dependerá princi­
los rnicrotúbulos citoplasmáticos del tegumento y palmente de la educación del saneamiento ambien­ Khuroo MS, Zargar SA. Biliary ascariasis. Gastroen­
del intestino e inhiben, además, la colinesterasa y la tal de una comunidad; es de especial importancia, terology 1985; 88:418-23.
captación de glucosa del parásito, llevándolo a una en este sentido, la existencia de sistemas para una Kightlinger LK, Seed JR, Kightlinger MB. Ascaris lum­
depleción de su glicógeno. El mebendazol presenta bricoides aggregation in relation to child growth sta­
buena disposición de excretas y agua potable. Se
una absorción muy escasa, pues se recupera sólo el debe evitar el riego de vegetales con aguas servidas, tus, delayed cutaneous hypersensitivity, and plant
10% en la orina (decarboxilado); el albendazol, en al igual que abonar las tierras con heces humanas. anthelmintic use in Madagascar. J Parasitol 1996;
cambio, se absorbe en forma rápida y casi total, 82:25-33.
Es fundamental mantener una educación sanitaria
recuperándose el 90% de la droga en la orina y heces permanente de la población. Krause S, Moraleda L, León G, Franjola R y cols. Absor­
antes del quinto día de la ingestión, con la ventaja ción intestinal de vitamina A y D-xilosa en escolares
Gracias a la buena tolerancia, bajo costo y efec­
de actuar también sobre los estados larvales del asintomáticos infectados por Ascaris /11111bricoides.
tividad de los medicamentos actuales, es posible
áscaris. Ambos medicamentos requieren tres días de Bol Chil Párasitol 1986; 41:62-7.
efectuar tratamientos masivos en forma periódica
tratamiento para obtener una curación cercana al Metropol SB. Health status of pediatrics refugees in Buffalo
(una o dos veces al año) indicados en comunidades
100%. No deben ser usados durante el embarazo, N.Y. Arch Pediatr Adolesc 1995; 149:887-92.
con alta endemia, lográndose en la práctica erradicar
pues se ha observado efecto teratogénico en ratas. Ozmen MN, Oguzkurt L, Ahmet B, Akata D, Akhan O.
al parásito después de algunos años como ha ocurri­
El mebendazol se usa en dosis de 100 mg dos veces do en Japón. Ultrasonographic diagnosis of intestinal ascariasis.
Figura 16-7. Obstrucción de la vía biliar por un ejemplar

::1.
al día durante tres días, igualmente para adultos y Pediatr Radio! 1995; 25:5171-2.
de áscaris, diagnosticado por colangiografia. (Caso del A nivel individual, es importante el lavado de
niños. El albendazol se recomienda en dosis de 200 Palmer DR, Hall A, Haque R, Anwar KS. Antibody isotype
Dr. Jorge Sapunar). manos, especialmente en los niños que juegan con
mg por dos veces al día durante tres días en el adulto responses to antigens of Ascaris lumbricoides in a
tierra, evitar la onicofagia, geofagia y la exposición !,:!
y 1O mg/kg de peso/día en el paciente pediátrico. de los alimentos a vectores mecánicos;,finalmente, case-control study of persistently heavily infected Ban­
deposiciones es altamente sensible, incluso con una El pamoato de pirantel tiene la ventaja de adminis­ gladeshi children. Parasitology 1995; 111:385-93.
lavar cuidadosamente las hortalizas bajo el chorro
sola muestra de heces. Este examen efectuado en trarse en una dosis para una curación mayor al 90%. Santos RV, Cosmibre Junior CE, Flowers NM, Silva JP.
de agua de la llave, recordando que los desinfectan­
forma adecuada, fracasa sólo si los gusanos son Se absorbe una cantidad muy escasa, por 16 que Intestinal parasitism in the Xavante ludian, central
tes usados habitualmente en verduras, no logran dañar
todos machos o si aún no han alcanzado su madurez prácticamente no se observan reacciones adversas. Brazil. Rev lnst Med Trop Sao Paulo 1995; 37:145-8.
los huevos de Ascaris lumbricoides.
sexual. Produce selectivamente un estímulo nicotínico per­ Schenone H, Rojas A, Galdames M, Villarroel F. Aspec­
Si bien los exámenes falsos negativos son infre­ sistente que lleva a un bloqueo neuromuscular tos epidemiológicos de las infecciones humanas por
cuentes, los falsos positivos no lo son, ya que las depolarizante y parálisis espástica de la musculatura BIBLIOGRAFIA protozoos y helmintos intestinales en Chile (1970-
heces humanas contienen numerosos artefactos que del parásito, además de inhibir su colinesterasa. Su 1980). Bol Chil Parasitol 1981; 36:44-8.
son frecuentemente confundidos con huevos de A. acción se antagoniza en forma mutua con la pipe­ Anonimus. Ascaris infections. Lancet 1985; ii:1284. Schults MG. Ascariasis: Nutritional implications. Rev
lumbricoides (véase Sexta Parte: Diagnóstico de razína, por lo que no deben asocíarse. Se usa en Crompton DWT, Nesheim MC, PawlowskiZS. Ascaria­ lnfect Dis 1982; 4:815-19.
laboratorio). dosis de 750 mg/1 vez/día en el adulto y I O mg/kg/día sis and its public health significance. London: Taylor Xu LQ, Yu SSH, YiangZX, Yang JL, Lai LQ,ShangXJ,
La eliminación de A. lumbricoides por la boca, en el niño. & Francis, 1985. Sheng CQ. Soil-transmitted helminthiases: nationwide
nariz o ano en un paciente con ictericia obstructiva, Las sales de piperazina han sido ampliamente Crompton DWT. The prevalence of Ascaris. Parasitol survey in China. Bull World Health Organ 1995;
absceso hepático u obstrucción intestinal concomi­ usadas; se absorben rápidamente en el intestino, y Today 1988; 4:162-9. 73:507-13.
tante, son altamente sugerentes de ascariasis com­ como el rango terapéutico-tóxico de la droga es
plicada. muy amplio, rara vez se observan efectos adversos.
En empiemas pleurales derechos por ruptura En el parásito altera la permeabilidad de la mem­
trandiafragmática de un absceso hepático por ásca­ brana celular a los iones que mantienen el potencial
ris, se pueden encontrar huevos en el aspirado de la de reposo; se produce así una hiperpolarización y
toracocentesis. supresión de los potenciales espontáneos de espiga, i¡¡
Ocasionalmente, la radiología con métodos de con bloqueo de la respuesta del músculo a la ace­ ¡¡
contraste y la ecografia, pueden ayudar en el diag­ tilcolina y parálisis fláccida. Se usan durante dos
nóstico, especialniente en las complicaciones en la días, pero se han comunicado esquemas efectivos 1!····

vía biliar (Figura 16-7). )


con tratamientos de uno hasta siete días. No debe

1í·'
1

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..• ' ,l.
Capítulo 17 TRJCOCEFALOSIS 173

TRICOCEFALOSIS
r1!
ANTONIO ATIAS

J

Definición. Infección producida por el Triclzuris del hombre infectado. Para continuar su desarrollo i!
trichiura, nematodo del intestino grueso, habitual­ necesita temperatura, humedad, calidad del suelo y :11
mente comensal, pero capaz de producir una sinto­ sombra parecidas a las requeridas por el huevo de 1

matología grave cuando se encuentra en grandes Ascaris lumbricoides. En condiciones óptimas, en­ 11
cantidades en niños con deficiencias nutritivas. tre 25 y 30 ºC y alto porcentaje de humedad del q
!
Sinonimia: trichuriasis, tricurosis, whipworms. suelo, el huevo se larva en dos a cuatro semanas;
recién entonces puede parasitar a un nuevo hospe­
Biología dero. Las variaciones de estas condiciones favora­
bles determinarán el tiempo de maduración. Este
El Triclmris lrichiura es un nematodo blanqueci­ huevo presenta una gran resistencia a las condicio­
no cuya hembra mide de 35 a 50 milímetros y el nes adversas del medio ambiente y puede conservar
macho de 20 a 25. Su aspecto es característico: adel­ su viabilidad durante años. Un bajo porcentaje de
gazado como un cabello en sus 3/5 partes anteriores, humedad o temperaturas por encima de los 50 ºC
se engruesa en los 2/5 posteriores, de modo que son rápidamente letales, mientras que las temperatu­
semeja una huasca o fusta. La extremidad anterior ras por debajo de los l O ºC detienen su desarrollo.
está fonnada por el orificio bucal, que carece de En condiciones naturales, el único hospedero del
labios, y el esófago, cuya porción anterior es un tubo T. trichiura es el hombre, el cual se infecta por vía
rnuséular muy delgado y la parte posterior es un tubo oral al ingerir huevos larvados del helminto (Figura
capilar circundado por una capa única de células con 17-3).
funciones secretoras, los esticocitos. La porción pos­ En el intestino delgado la larva escapa del huevo Figura 17-1. (A) Esquema de Trichuris trichiura hembra y macho. (B) T. Tric/mra hembra y macho.'
terior, que contiene el aparato genital enrollado va­ y penetra a las criptas de Lieberkühn. Después de un
rias veces sobre sí mismo, es recta o ligeramente corto periodo, la larva vuelve al lumen intestinal y por T. trichiura guarda estrecha relación con el gra­ vegetación. En las áreas urbanas de Latinoamérica
curvada en la hembra y en el macho aparece enros­ migra a la n;gión cecal, alcanzando su estado adulto, do de humedad y la cantidad de lluvias de las áreas se observa una progresiva disminución de su preva-··
cada en el sentido ventral, corno la cuerda de un reloj sin pasar por los pulmones como ocurre con otros geográficas consideradas. En encuestas realizadas !encía, lo que se explica por el mejoramiento de la
(Figura 17-1). Su hábitat es el ciego, al cual queda nematodos intestinales. El tiempo requerido entre la en localidades suburbanas y rurales de Chile, las urbanización y la pavimentación de las calles, la
enhebrado por su porción anterior pilosa que intro­ ingestión de huevos larvados, el crecimiento de los tasas de infección por T. trichiura aumentaron pro­ extensión de redes de agua potable y de alcantarilla­
duce en las criptas glandulares; en las infecciones gusanos y la aparición de huevos en las heces del gresivamente del 1,2% en la zona norte, de clima do, la disminución de las acequias de riego, los pe­
masivas, el tricocéfalo se distribuye por todo el in­ hospedero se ha calculado en alrededor de un mes. seco y caluroso, hasta 65% en la,zona sur del país ríodos de sequía prolongados y el incremento de la
testino grueso. Los huevos, elípticos, de color La longevidad del tricocéfalo se ha estimado entre con elevado porcentaje de hume,dad y abundante cultura higiénica de la población.
parduzco, miden alrededor de 40 a 50 micrones en siete y diez años.
su diámetro mayor y presentan una gruesa envoltura Patología
de doble contorno que encierra a la célula-huevo. Epidemiología
Ambos polos están coronados por sendos tapones El daño provocado por la tricocefalosis está rela­
mucosos, que le confieren su aspecto típico de La semejanza biológica y los requerimientos cionado con la cantidad de parásitos en el intestino.
limoncito o de tonel (Figura 17-2 y Lámina 12). ambientales para el desarrollo de los huevos de T. Se estima que una carga pequeña de gusanos, no
La cantidad de huevos eliminada es reflejo del trichiura y de A. lumbricoides explica la similitud de daría origen a sintomatología. Sin embargo, se ha
número de gusanos presentes en el intestino. Se ha la epidemiología de ambas parasitosis. De ahí que comprobado un sensible retardo del crecimiento en
calculado que se eliminan entre 200 y 300 huevos las tasas de infección por estos gusanos sean pareci­ niños con infección crónica por T. trichiura con sólo
por gramo de heces por cada hembra de T. trichiura. das en diversas áreas geográficas. La contaminación tres a cuatro evacuaciones diarias, no formadas, con
1
1 Aunque la eliminación de huevos con las heces del fecal humana del suelo, las caracteristicas fisicoquí­ mucosidades y ocasionalmente con sangre, las cua-
hospedero es un fenómeno muy constante, presenta rnicas de la tierra, un alto grado de humedad y tem­
i
les eliminaron, después del tratamiento antihelmín­
variaciones cuantitativas dependientes del tamaño peraturas adecuadas, favorecen la mantención y pro­ tico, alrededor de 200 gusanos adultos. Pero esta
de los gusanos y de la intensidad y antigüedad de la pagación de estos parásitos.

l
situación puede revertirse, mediante el tratamiento
infección. Aunque la tricocefalosis es cosmopolita, prevale­ específico y la curación de la deficiencia en hierro, : .
1 ., ·· El huevo de):'J'.-,;tfii!hiura, no segmentado en el ce en zonas tropicales y templadas con un régimen La tricocefalosis masiva, caracterizada por la pa­
momento de la postura, sale al exterior con las heces de lluvias elevado. La prevalencia de la infección rasitación del intestino por cientos o miles de hel-
Figura 17-2. Huevo de Triclwris trichiura.
1]4 PARASITOLOGIA MEDICA TRICOCEFALOS/S 175

Intestino delgado El aspecto microscópico en las infecciones co­


Adultos rrientes no demuestra lesiones importantes en la
mucosa; a lo más, existe una distorsión de sus cé­
lulas y glándulas por el contacto con la porción
adelgazada del gusano. En las infecciones masivas,
se observa hiperemia y la presencia de cientos o de
miles de tricocéfalos a lo largo de todo el intestino
grueso, desde la válvula ileocecal hasta los márge­
Intestino Huevos nes del ano, tapizando la mucosa. También, en algu­
delgado í��dtiros· Heces nos casos, se pueden encontrar gusanos en la por­
HOMBRE ción tenninal del intestino delgado. En estas infec­
FECALISMO ciones masivas no se ha demostrado un daño severo
AMBIBNTE de la mucosa, ni reacción inflamatoria, salvo una
inflamación linfoplasmocitaria leve entre las criptas
de Lieberkühn y un ligero daño de la mucosa en los
puntos de penetración de los gusanos (Figura 17-5).
El activo peristaltismo determinante de los dolo­
res cólicos y, tal vez, de los cuadros disentéricos
repetidos, podría explicarse por la irritación de los
plexos nerviosos intramurales producida por los
múltiples helmintos.
Poco se sabe sobre la respuesta inmune a los
helmintos intestinales, especialmente en aquellas en

1
que interviene la lgE. El T. trichiura despierta en el
hospedador una reacción de hipersensibilidad inme­
diata local a nivel de la mucosa del colon, lo que
probablemente sea un factor importante en la pato­
genia de la disentería, síndrome que se desencadena
con aparente indemnidad de la mucosa colónica. En íl11
roedores, la anafilaxis intestinal mediada por lgE es

/
un importante componente de la respuesta inmune ,¡
I:
protectora contra helmintos intestinales. Cuando a /i
esta reacción se agrega la presencia de anticuerpos·
sérícos y células T, se alcanza una inmunidad .pro- li
I'

Fig�ra 17-4. Tricocefalosis masiva. (A) Autopsia de un


caso de infección con miles de ejemplares en el intestino
grueso. (Gentileza del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica).
(B) y (C) Ejemplares de Trichuris tricliiura recolectados
después del tratamiento de un niño con infección masiva.

1
(Caso del Dr. Antonio Alías, Chile).

minios (Figura 17-4), se observa en niños con tras­


tornos nutritivos graves provenientes de zonas tro­
picales y, ocasionalmente, de países templados. La
patología de la tricocefalosis masiva no está total­
mente esclarecida y las lesiones encontradas en Figura 17-5. Corte histológico de intestino grueso con
necropsias deben ser interpretadas con cuidado, infección masiva por Triclmris trichiura en que, fuera de
porque podrían ser atribuibles a deficiencias:nutri­ la hiperproducción de moco, se observa la relativa in­
tivas, a poliparasitismo o a infecciones bacterianas demnidad de la mucosa. (Cortesía del Dr. Roberto Cés­
Figura 17-3. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión de Tric/zuris trichiura. asociadas. pedes, Costa Rica).

_A.
I 76. PARASITOLOGIA MEDICA TRICOCEFALOS/S 177

tectora completa. Sin embargo, en el hombre no hay de estos niños suelen advertir gusanos en la mucosa co de Laboratorio). Este dato adquiere importancia BIBLIOGRAFIA
evidencias de una inmunidad protectora contra hel­ rectal prolapsada. Pueden presentarse náuseas y en los casos de anemia.
mintos intestinales. Niños tricocefalósicos presen­ vómitos que impiden la alimentación, contribuyen­ Bundy DAP. Epidemiological aspects of Triclwris and
tan síndromes disentéricos por largo tiempo, a pesar do a la deshidratación del enfermo. Entre los sínto­ Tratamiento trichuriasis in Caribbean communities. Trans R Soc 'I 1
de tener alta concentración de anticuerpos séricos y mas generales destacan la palidez y astenia (pro­ Trop Med Hyg 1986; 80:706-18.
El medicamento de elección es el mebendazol
reacción anafiláctica antiparasitaria local. Claramen­ pias de la anemia), anorexia y el progresivo retardo Bundy DAP, Cooper ES, Thompson DE y cols. Epide­
que actúa inhibiendo la captación y utilización de la
te la inmunidad mediada por anticuerpos es insufi­ del crecimiento. mio!ogy and population dynamics of Ascaris lum­
glucosa por parte del helminto, sin afectar el meta­
ciente para eliminar a los T. trichiura adultos del Llama la atención la intensa geofagia o "pica" de bricoides and Tric/wris trichiura infection in the same
bolismo celular del hospedero. El tratamiento debe
intestino del hombre, aunque no se puede descartar algunos niños enfermos. La necesidad de comer tie­ community. Trans R Soc Trop Med Hyg 1987; 81:987-
iniciarse con urgencia en la tricocefalosis masiva y
alguna protección contra la invasión por larvas. rra llega a ser tan imperiosa, que los pacientes des­ 93.
debe complementarse con una dieta rica en proteí­
La etiopatogenia de la anemia de la tricocefalosis piertan durante la noche para satisfacerla. Al curar la Bundy DAP, Cooper ES. Tric/wris and trichuriasis in
masiva no está totalmente esclarecida. Probablemen­ nas y hierro. Administrado en dosis de 200 mg x 2
parasitosis, este síntoma habitualmente desaparece. humans. Adv Parasitol 1989; 28: l 07-73.
veces por 3 días, se obtiene curación en el 80 a 90% Burrows R, Lillis WG. The whipwonn as a blood sucker.
te sus causas sean de variada naturaleza, las que, al En la infección crónica por T. trichiura, los pa­ de los casos. Los enfermos que siguen mostrando
actuar en conjunto, llevan a este estado patológico. cientes suelen presentar dedos en palillo de tambor. J Parasitol 1964; 50:675-80.
huevos del T. trichiura en las heces ya no tienen
Factores dependientes de helminto, unidos a facto­ En una recopilación hecha por Cooper y Bundy, Cooper ES, Bundy DAP. Tric/wris is not trivial. Para­
trascendencia clínica, porque ha disminuido la
res del hospedero, explicarían la aparición de la ane­ basada en 13 trabajos escogidos por haber utilizado sitology Today 1988; 4:301-6.
masividad de la infección.
mia. Entre los primeros estaría su número y su grado una metodología de estudio comparable, encontra­ Cooper ES, Bundy DAP, Mac Donald TI, Golden MHN.
El albendazol, otro derivado benzimidazólico,
de hematofagia. Esta última se explica porque el ron la siguiente incidencia de síntomas y signos en Growth suppression in the tric/wris dysenterie
tricocéfalo, en su extremidad anterior, posee unas también se utiliza con éxito en esta parasitosis en
un total de 697 casos de tricocefalosis masiva: di­ syndrome. Eur J Clin Nutr 1990; 44:285-91.
dosis única de 400 mg x 3 días, aunque su eficacia
finas lancetas cortantes que producen movimientos· sentería 8 I %, anemia (hemoglobina< 10 g/dL) 81%, Cooper ES, Spencer J, White-Alleng CAM y cols. Im­
muy veloces de rotación, en sentido anteroposterior, en la erradicación de la infección pareciera ser algo mediate hypersentivity in colon of children with
retardo del crecimiento (peso < 2 desviaciones es-· inferior al mebendazol.
lo que le permite introducirse a través de los tejidos y tándar bajo la media de referencia) 7 I %, dedos en chronic Tríchuris trichiura dysentery. Lancet 1991;
llegar hasta los vasos sanguíneos de la submucosa; palillo de tambor 40% y prolapso rectal 34%. Prevención 338:1104-7.
además, se ha investigado el contenido del esófago El pronóstico de la tricocefalosis es benigno en Gilman RH, Chong YH, Davis C y cols. The adverse
de los helmintos, observándose restos de glóbulos las infecciones corrientes, pero se toma sombrio en Se orienta a impedir la contaminación fecal hu­ consequences of heavy Trichuris infection. Trans R
rojos del hospedero. Se ha demostrado mediante es­ las formas masivas que dejadas evolucionar espon­ mana del suelo, mediante una adecuada disposición Soc Trop Med Hyg 1983; 77:432-8.
tudios con Cr5 l , que el hospedero pierde 0,005 mL de táneamente, terminan con la muerte. En general, el de escretas y la creación de hábitos de higiene per­ Layrisse M, Aparcedo L, Martinez-Torres C, Roche M.
sangre por helminto y por día, lo que significa que en niño sucumbe por anemia, por infecciones intercu­ sonal. En la prevención individual, se aconseja la­ Blood loss due to infection with Trichuris trichiura.
los niños infectados con más de 800 parásitos, pue­ rrentes o por complicaciones quirúrgicas (peritonitis, var cuidadosamente las verduras (lechugas, coles) y Am J Trap Med Hyg 1967; 16:613-9.
de desarrollarse una anemia por deficiencia de hierro intususcepción, etc:). El pronóstico varía de manera ciertas frutas (fresas, frutillas) antes del consumo. Mac Donald TI, Choy MY, Spencer J y cols. The his­
(véase el Capítulo 61: Anemia y parasítosis). Parece favorable con la terapia específica y con el trata­ En los niños, debe crearse el hábito del lavado topathology and immunohistochcmistry of the cecum
indudable el papel del estado nutritivo del hospedero miento de la anemia. minucioso de las manos después de jugar con tierra in children with Trichuris disentery syndrome. J Clin
como factor predisponente, puesto que es de regla y antes de la ingestión de cualquier alimento. Pathol 1991; 44:194-99.
graves deficiencias nutritivas y alteraciones del co­ Diagnóstico
ciente pondoestatural en los niños con tricocefalosis
masiva. El hemograma es normal en las infecciones le­
La geofagia o "pica", observada en algunos casos ves, pero en las tricocefalosis masivas revela ane­
de tricocefalosis masiva, debe contribuir al incre­ mia hipocroma microcítica y eosinofilia elevada.
mento de la infección, pero no seria la causa princi­ La anemia puede adquirir caracteres graves, con dos
pal de la masividad, puesto que, cuando se trata la millones de glóliulos rojos por mm', o aún menos,
anemia tricocefalósica, este signo habitualmente y con una baja importante de la cifra de hemoglo­
desaparece. bina. En algunos casos, hay aumento de eosinófilos
que pueden alcanzar entre 30 y 50%.
Sintomatología El diagnóstico de infección por tricocéfalos se
establece por el hallazgo de los típicos huevos de
La mayoría de las infecciones por tricocéfalos son T. trichiura en las heces. Se emplea el examen seria­
asintomáticas. Los variados síntomas que a veces se do de las deposiciones por técnicas de enriqueci­
imputan a la presencia del T. trichiura pueden corres­ miento, bastando tres muestras día por medio. Ade­
ponder a otras etiologías. La aparición de sintoma­ más, el diagnóstico parasitológico se puede hacer
tología está condicionada por la carga parasitaria. por medio de la observación directa de los gusanos
La tricocefalosis masiva se presenta en niños al efectuar una rectoscopia o en la mucosa rectal
desnutridos entre los dos y cinco años. Lo más lla­ cuando se presenta prolapso. En casos masivos, la
mativo son los síntomas digestivos, caracterizados cantidad de huevos en el examen directo de heces es

I¡¡L;, '
por crisis disentérica_s �epetidas, con depos)ciones muy abundante.
mucosanguinolentas, pujo, tenesmo, dolores abdo­ Se utilizan diversas técnicas de laboratorio para
minales, meteorismo y prolapso rectal. Las madres contar los huevos (véase la Sexta Parte: Diagnósti- ' 1

¡¡ f1
'
C3pítulo 18 ANQU/LOSTOMOSIS 179

ANQUILOSTOMOSIS
CESAR NAQUIRA

Definición. Helmintosis intestinal causada por cortantes en N. americanus, en la porción ventral de


alguno de los nematodos Ancylostoma duodena/e o la cápsula (Figura 18-3). La bolsa copulatriz es una
Necator americanus, o por ambos, que ocasionan estructura rígida por la presencia de engrosamientos
anemia, síntomas digestivos y generales. Sinónimo: llamados costillas que contiene los órganos copu­
Uncinariosis. latrices, cuya configuración es característica para
cada especie. Las vulvas de las hembras se abren a
Biología diferentes alturas, según la especie; muy baja en A.
duodena/e y en el tercio medio en N. americanus.
Los parásitos. A. duonenale y N. americanus Las características más importantes de la morfo­
pertenecen a la Familia Ancylostomatidae, a la cual logía o estructura interna de los gusanos adultos
también pertenecen Ancylostoma ceylanicum, cau­ son: el tubo digestivo en su parte alta muestra un
sante de la anquilostomosis en algunos países de esófago provisto de un bulbo esofágico prominen­
Asia y otros nematodos de animales (Ancy/ostoma te, apto para aspirar con fuerza el alimento y glán­
braziliense, parásito de perro y gato, y Ancy/ostoma dulas salivales destacables. El intestino termina en
caninun, parásito del perro) que pueden ocasionar, Figura 18-3. Extremidad anterior de los anquílostómidos. (A) Necator americanus. (Cortesía de la Dra. Maríetta Voge,
lesiones cutáneas (larva migrante cutánea) en el si­ UCLA, Estados Unidos). (B) Ancylostoma duodena/e con la masa de succión en el interior de la cápsula bucal, en un
tio de penetración de sus larvas, Uncinarias corte de intestino delgado. (Cortesía del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica).
Los adultos son gusanos cilíndricos, de color blan­
quecino, de 8 mm (macho) a 12 mm (hembra) de Ancy/ostoma Necator
longitud por 0,5 mm de diámetro (Figura 18-1 ). duodena/e americanus un ano posterior. En las hembras destaca el desarro­ una blástula con numerosos blastómeros (Figura
Las características morfológicas e,ctemas más llo del aparato genital que se aprecia como tubos 18-2). Dependiendo del tiempo de permanencia de
importantes son: finos que envuelven el tubo digestivo. los huevos en el contenido intestinal, es posible ob­
a) Presentan la e,ctremidad anterior curvada ha­ Los gusanos se localizan en las partes altas del servar una larva en el interior de la cáscara del hue­
cia el dorso en fonna de gancho; de allí la denomi­ CAPSULA intestino delgado, principalmente el duodeno. Se vo, y aún, la larva eclosionar en las hecés recién.·
nación de uncinarias (uncus=gancho). BUCAL adhieren a la mucosa intestinal mediante la cápsula emitidas.
b) Dimorfismo se,cual, caracterizado por la pre­ bucal, usando los ganchos (A. duodena/e) o las pla­ La larva eclosionada ya sea en las heces o en el
sencia en la e,ctremidad posterior del macho de la cas (N. americanus). Se alimentan de la sangre que medio ambiente, es una larva rabditoidea, es decir,
bolsa copulatriz de fonna acampanada y la termina­ ingieren y de los restos de los tejidos que han des­ presenta un bulbo esofágico. Estas larvas miden de
2 pares de dientes Láminas cortantes truido. La saliva de las glándulas salivales contienen 200 a 300 µm de longitud por 20 a 30 µm de diá­
ción en punta en la hembra (Figura J 8-2).
La boca de los gusanos está provista de una sustancias anticoagulantes, lo que les pennite evitar metro y deben encontrar en el medio ambiente, con­
cápsula bucal con la presencia de ganchos, en nú­ la coagulación de la sangre; de ahí que, cuando se diciones favorables para su evolución.
mero de cuatro en A. duodena/e y de dos placas movilizan a otro lugar del intestino, dejan una pe­ La larva pasa por dos estadios evolutivos antes de
queñ'a úlcera sangrante, por lo que, a la cantidad de convertirse en larva filariforme, la cual morfoló­
BOLSA sangre que se pierde por la ingesta del gusano (cal­ gicamente se caracteriza por no tener bulbo esofá­
COPULATRIZ culada entre 0,25 a 0,3 mL/día por anquilost9mí­ gico, está rodeada de la vaina que no ha desprendido
deo ), se añade la pérdida por el sangrado de la úlcera y constituye la forma infectante para el hombre (Fi­
dejada por el gusano al moverse. gura 18-4).
La hembra fecundada coloca entre 10.000 a 20.000 Al ponerse la piel o mucosa del hombre en con­
huevos diarios que tienen las siguientes característi­ tacto con larvas filariformes, éstas pierden su vaina
cas morfológicas que permiten el diagnóstico del y penetran hasta alcanzar los vasos sanguíneos de la
parasitismo: piel o de la mucosa oral, en el caso de haber sido
HUEVO En condiciones normales de observación al mi­ ingeridas. Por vía sanguínea llegan hasta la circula­
croscopía, es dificil hacer la diferenciación de los ción pulmonar y luego atraviesan los alvéolos pul­
huevos de cada especie, pues son muy similares. Son monares. En este pasaje sanguíneo, la larva va mu­
huevos ovalados de 60 a 70 µm por 30 a_ '}O µm. La dando ¡¡,larvas de tercer, cuarto y quinto estadio
Figura 18-1. Ejemplares adultos de A11cylosto111a duode­ Figura 18-2. Ancyldstóina duodena/e y Necator ameri­ cáscara es delgada y hay generalmente Ún espacio evolutivo hasta alcanzar la forma juvenil, la que será
na/e. canus. Esquemas. entre ella y el contenido del huevo, que puede ser de deglutida, alcanzando el intestino, el cual será el
180 PARASITOLOG!A MEDICA ANQUILOSTOMOSIS 181

Epidemiología TABLA 18-1


UNCINARIOSIS. EXPECTATIVAS DE HALLAZGOS CLINICOS SEGUN CANTIDAD DE HELMINTOS
La forma infectante es la larva filariforme, la puerta CALCULADA POR RECUENTO DE HUEVOS EN LAS HECES*
de entrada es la piel y rara vez, la mucosa oral. El
mecanismo de transmisión es el contacto con suelos N º de huevos por gramo fecal Cálculo del número Intensidad de Formas clínicas
contaminados con la forma infectante del parásito.
Necator Ancylostoma de uncinarias la infección
El hombre es el único hospedero definitivo de A.
duodena/e y N. americanus. La anquilostomosis
está ampliamente difundida en el mundo, en las zo­ 1.100 2.200 50 Leve Asintomática (portador)
nas templadas y tropicales. En Latinoamérica y el 2.200 4.400 100 Moderada Oligosintomática
Caribe está presente desde el Sur de Estados Unidos 11.000 22.000 500 Intensa Anemia+
(paralelo 38° Norte) hasta Sudamérica (paralelo 34° 22.000 44.000 1.000 Muy intensa Hipersintomática
Sur), principalmente en zonas cuya ecología es favo­ Anemia++
rable para la presencia y difusión de la infección. Se
considera que los parásitos han sido introducidos al 66.000 132.000 3.000 Intensísima Grave, mortal: anemia++++
continente americano desde Asia (A. duodena/e) y •Según P. Garaguso.
Africa (N. americanus). En algunos lugares sólo se
encuentra una de las dos especies, y en otros, ambas
están presentes; incluso, en el mismo individuo. Ciclo de Looss. El paso de los estadios larvales bias en la médula ósea (hlperplasia), en el hígado
La presencia del parasitismo se favorece por la por la sangre suele cursar con escasas lesiones pul­ (degeneración centrolobulillar) y en el corazón (insu­
presencia de personas parasitadas que contaminan monares, pequeñas hemorragias e infiltrado de eosi­ ficiencia cardíaca).
con sus deyecciones el suelo. El suelo favorable para nófilos, que dan poca sintornatología.
el desarrollo y persistencia de las larvas debe tener: Sintomatologia
humedad, temperatura elevada, sombra y detritus Anemia. Los gusanos adultos son hematófagos
orgánico. Estas condiciones se dan en circunstancias y la causa inicial de la pérdida de sangre; sin embar­ Las manifestaciones clínicas más importantes de
especiales, principalmente en climas tropicales, más go, la anemia que se produce depende, principalmen­ la anquilostornosis, están relacionadas a la anemia
raramente en minas de carbón o excavaciones he­ te, de dos factores: a) la alimentación balanceada o que ella puede causar; sin embargo, ella está condi­
chas por el hombre, donde los trabajadores contami­ deficitaria de hierro de la población parasitada, ya cionada al número de gusanos adultos, a la ingesta
nen con sus heces el suelo y se encuentre humedad que en las zonas endémicas, tropicales, el déficit de o reserva de hierro de las personas y a la duración
l(l y temperaturas elevadas. Estos elementos permiten hierro es frecuente en la dieta; y b) la intensidad y de la infección. La anemia es microcítica hipocrómi­
'o
co la persistencia de la larva filariforme envainada, has­ duración de la infección: se ha intentado establecer ca, pudiendo llegar las cifras de hemoglobina a cifras
1
r-- ta que pueda penetrar en la piel de un susceptible y una correlación entre el número de gusanos y la de 1-2 g/dL de sangre, en los casos más severos; y
despojarse de la vaina. intensidad de la anemia, pero estas cifras son relati­ en las zonas endémicas, cifras de 8-9 g/dL suelen··
o El grupo etario más susceptible es el de niños de vas, pues parte de la sangre de la hemorragia intes­ observarse con frecuencia, sobre todo en niños y
gj corta edad que juegan en el suelo coritarninado y que tinal es absorbida y por ello tiene mayor importancia gestantes, pacientes en que la palidez y debilidad
üí
e
aún no han desarrollado algún mecanismo defensi­ la cantidad de hierro en la ingesta diaria. Cifras dadas suelen estar presentes.
<l1 vo, corno ocurre en la población adulta. por diversos autores, señalan que lesiones leves a Las lesiones cutáneas de la puerta de entrada,
e La falta de sistemas adecuados de eliminación de medianas ocurren con menos de 500 gusanos, pero suelen pasar desapercibidas o confundidas con le­
·O
·¡:;
ro excretas, principalmente letrinas en áreas rurales, el por encima de esa cifra hay alteraciones más severas siones banales de la piel. El paso de las larvas por los
'5 bajo nivel educativo y la pobreza de la población o graves (Tabla 18-1). pulmones, rara vez produce el sindrorne de Loeffler
tJ
ro afectada, contribuyen a la persistencia de este para­ con sintomatologia respiratoria.
::¡;
sitismo. Hipoalbuminemia. Adicionalmente a la pérdida La sintomatología digestiva es variable. En las
de sangre, hay pérdida de proteínas, que se agrava personas de zonas endémicas pueden faltar o ser
Patología en casos severos en que las lesiones intestinales escasos los síntomas digestivos: dolor abdominal,
ocasionan una baja absorción de albúmina. pérdida de apetito, náuseas, diarrea, etc. En perso­
Rhabdito,rle Puerta de entrada. La piel delgada de las zonas nas recién infectadas, la sintornatología digestiva
interdigitales de los pies y las manos suelen ser las Malabsorción intestinal. Cuando el número de puede ser más intensa, sobre todo si el parasitismo
Figura 18-4. Ciclo evolutivo de los anquilostómidos. gusanos es grande y la duración de la infección tiene es abundante.
zonas más frecuentes de penetración de las larvas
filariformes; en estos sitios u otros, se produce una un tiempo prolongado, las pequeñas y numerosas Las personas con anemia severa, acompañada de
hábitat del adulto. Este pasaje por la vía sanguínea se dermatitis que se manifiesta por sensación de ardor ulceraciones intestinales, así como las alteraciones hipoalburninemia, suelen presentar edemas de miem­
llama ciclo de Looss, que fue quien lo describió, y y escozor; la piel aparece eritematosa, con edema e en las criptas intestinales y la reducción de las micro­ bros inferiores hasta llegar a la anasarca, hepato­
suele durar de tres a cuatro semanas. incluso, aparición de pápulas y vesículas que des­ vellosidades, determinan un síndrome de malab­ megalia e insuficiencia hepática y cardíaca con dis­
La longevidad de los adultos se estima en más de _aparecen a los pocos días, sin dejar huella. Estas sorción intestinal. Además se observa, en los casos nea, soplos cardíacos y en ocasiones, la muerte por
seis años, lo que tiene irnportancia•1:n·personas que ': lesiories de puerta de entrada suelen pasar desaper­ crónicos, infiltración inflamatoria de la lamina causas intercurrentes (bronconeumonia, insuficien­
han dejado hace algún tiempo los lugares de conta­ cibidas en las zonas endémicas. propria: linfocitos, monocitos y eosinófilos. cia renal, etcétera).
gio. En los casos de intensa anemia se observan caro- Se ha señalado que habría diferencias en la seve-
182 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 19
ridad de la sintomatología entre el parasitismo pro­
ducido por A. duodenale y N. americanus; de este
Identificación de especies de uncinarias: Necatorame­
ricanus y Ancylostoma duodena/e en el Departamento
ESTRONGILOIDOSIS
modo, a igual número de parásitos, A. duodenale de Cochabamba. Grac Med Boliv 1990; 14:111-4. ANTONIO ATIAS
produciría cuadros más severos. Banglero W, Banglero J, Bradley M. Quantitative genetic
analysis of suceptibility to hookworm infection in a
Diagnóstico population from rural Zimbawe. Hum Biol 1997;
69:201-8.
El diagnóstico clínico debe sospecharse en per­ • Carrada T. Uncinariasis infantil como problema de salud
sonas de zonas endémicas que presentan anemia y pública. Bol Med Hosp lnfant Mex 1986; 43:789-94.
síntomas digestivos. El diagnóstico diferencial se Cooper OJ, Guevara A, Guderian RH. Intestinal helmin­ Definición. Infección producida por un pequeño za la faringe, donde es deglutida, y pasa al tubo
establece con otras causas de anemia. thiasis in Ecuador. The relationship between preva­ nematodo del género Strongyloides, más común en digestivo, descendiendo hasta llegar a la parte alta
La confirmación diagnóstica se hace por el hallaz­ lence, genetic and social economic factors. Rev Soc las zonas tropicales y caracterizado por la produc­ del intestino delgado. Penetra la mucosa intestinal
go de los huevos de los parásitos en heces y ocasio­ Bras Med Trop 1993; 26:175-80. ción de un cuadro digestivo o generalizado, de curso dando origen a una hembra partenogenética, la cual
nalmente, de las larvas. Siendo dificil distinguir las Crompton DW, Whitehead RR. Hookworm infections and crónico y pronóstico variable. comienza la postura de huevos. Se completa así el
diferencias morfológicas de los huevos de ambos human iron metabolism. Parasitology 1993; 107:137- ciclo biológico.
parásitos (A. duodenaleyN. americamts), cuando se 45. Biología
considere necesario hacerlo, hay que realizar el méto­ El-Naggar HM, El-Shazly AM, El-Hahdy M. lmmune Ciclo indirecto. Las larvas rhabditiformes que
do de Harada-Mori, que consiste en la incubación de response in dogs infected with Ancylostoma duode­ El Strongyloides stercoralis es un nematodo fi­ se encuentran en el suelo, en vez de evolucionar
dichos huevos en medio húmedo (tira de papel filtro na/e. J Egypt Soc Parasitol 1994; 24:77-83. liforme muy pequeño, con un ciclo biológico en el hacia larvas filariformes, dan origen a hembras y a
en un tubo de prueba) y observar el desarrollo de las Josefzoon LM, Oostburg BF. Detection of hookworm like cual alternan generaciones de vida libre y de vida machos de vida libre. Esta hembra es diferente a la
larvas para establecer las diferencias morfológicas. larvae in human feco cultures in Suriname. Am J Trop parasitaria. La hembra parásita mide alrededor de 2 partenogenética: es rhabditifonne (con esófago en
Los métodos de examen de heces directo y de concen­ Med Hyg 1994; 51:501-5. mm de largo, por 50 µm de diámetro; es de esófago masa), de 1 mm de largo por 50 a 75 µm de diáme­
tración son útiles. Cuando se requiere contare! núme­ Kobayashi A. Repercusiones sociales y económicas de las recto y su extremidad posterior es aguzada. Su hábi­ tro. De los huevos colocados por la hembra, emer­
ro de huevos por gramo de heces, el método de I<.ato­ helmintiasis transmitidas por el suelo. Salud Pública tat es la submucosa del intestino delgado, principal­ gen larvas rhabditiformes que, luego de algunas
Katz resulta el más conveniente. Mex 1986; 28:384-6. mente del duodeno, pero en infecciones masivas mudas, dan origen a larvas filariformes, las cuales
Kumar S, Pritchard DI. Distinction of human hookworm puede invadir todo el intestino delgado y grueso y, constituyen las formas infectantes para el hombre,
Tratamiento larvae based on lectin-bincling characteristics. Parasite­ eventualmente, alcanzar los conductos pancreático y a través del contacto con su piel, inicia� el ciclo
lmmunol 1992; 14:233-7. y biliar. En el espesor de la mucosa y de la submucosa de infección antes descrito. En raras ocasmnes las
El uso de antihelmínticos y de suplemento de Kumar S, Pritchard DI. Apparent feeding behaviour of coloca huevos de 50 µm, muy parecidos a los de las larvas rhabditiformes generadas en este ciclo indi­
hierro en la dieta, constituyen los componentes esen­ ensheathed thirdstage infective larvae of human hook­ uncinarías. De los huevos emergen larvas rhabti­ recto pueden, a su vez, evolucionar hasta transfor­
ciales en el tratamiento de la anquilostomosis. worms. lnst J Parasitol 1994; 24:133-6. difomies de 200 µm y con típico esófago en masa, las marse en nuevos gusanos adultos de vida libre.
Los benzoimidazólicos y las sales de pirantel, Lanari FJB, Cerdera A, Benavento MY. Estructura hepá­ que atraviesan la pared intestinal hacia el lumen y
administrados por varios días (3) son los antihel­ tica en anérñicos crónicos por uncinariasis. Rev Asoc desde allí son expulsadas al exterior con las heces del Autoinfección o infección endógena. Algunas
mínticos más usados. La dosis y la forma de presen­ Med Argent 1985; 98:17-9. huésped. Más raramente, los huevos suelen alcanzar larvas rhabditiforrnes no alcanzan a salir al exteríor
tación se encuentran en el Capítulo 66: Tratamiento Nolan TJ, Bhopale MV, Meqyeri Z, Shad GA. Cryopre­ el lumen intestinal y eliminarse como tales, dando y a nivel de la parte baja del intestino delgado o en
y Tablas Terapéuticas. servation of human hookworm. J Parasitol 1994; lugar a larvas rhabditiformes en el medio externo. el colon, se transforman en larvas filariformes. Otras
80:648-50. La larva rhabditiforme puede continuar el ciclo veces, restos de heces pegadas a los márgenes del
Prevención Olatunde BD, Onyemeluewe BF. Immunosupression in mediante tres modalidades posibles (Figura 19-1): ano pueden contener larvas rhabditiformes que ma­
nigerians with hookworm infection. Afr J Med Sci duran en este sitio como larvas filariforrnes, las cua­
La profilaxis colectiva es la más importante en las 1994; 23:221-5. Ciclo directo. La larva se alimenta en el medio les penetran el intestino o la piel perineal, alcanzan
áreas endémicas, y está dirigida a evitar la contami­ Pérez C, lnzunza E, Ehrmentraut A. Uncinariasis familiar. ambiente de materia orgánica que encuentra en el la circulación general y continúan su ciclo.
nación del suelo con heces humanas; para ello la Parasitol al Día 1990; 14:47-8. suelo húmedo, sufre dos mudas y al cabo de dos o
educación sanitaria, la provisión de letrinas y el tra­ Pérez F, Murillo J, Laurent G. Dosis única antihelmíntica: tres días se transforma en una larva filariforme, de Epidemiología
tamiento selectivo de los infectados ha permitido, en estudio comparativo con dosis única entre oxantel/ unos 700 micrones de longitud, con esófago cilíndri­
muchos países del mundo y de Latinoamérica, redu­ pirantel y albendazol en ascariasis, tricocefalosis y co, la que ya no se alimenta y constituye la fonna La estrongiloidosis es prevalente en extensas
cir las cifras de prevalencia. uncinariasis. Rev Med Costa Rica 1986; 53:5-12. infectante para el hombre. Permanece en el suelo por áreas de clima tropical de Asia, Africa y América.
La población objetivo de esta profilaxis debe ser Prociv P, Luke RA. The changing epidemiology of human períodos cercanos a cincuenta días. Puesta en con­ A medida que las zonas geográficas se alejan del
la infantil, pues su desarrollo fisico y mental están hookworm infection in Australia Med J Austr 1995; tacto con la piel del hombre, la penetra y alcanza la trópico, la estrongiloidosis se hace más escasa. No
amenazados por la persistencia de este parasitismo 162:150-4. circulación general por los vasos venosos y linfáti­ tiene predilección por ninguna edad y es más fre­
que les puede ocasionar anemia e insuficiencia de Restrepo M, Izada D. Estudio comparativo de flubendazol, cos; llega, luego, al corazón derecho y pasa al pul­ cuente en los adultos. En América Latina existen
absorción intestinal de los alimentos. oxantel-pirantel, albendazol y mebendazol en el trata­ món. En esta etapa ha aumentado de tamaño; es u�a regiones de Brasil y del Perú con cerca del 60% �e
miento de helmintos transmitidos por el suelo. Acta larva adolescente o juvenil que rompe el endoteho la población infectada. En Chile, se han descrito
Med Colomb 1987; 12:344-51. capilar y la pared de los alvéolos pulmonares, as­ casos esporádicos.
BIBLIOGRAFIA Salvatierra de Burgos MR, Centurion J. Manifestaciones · ciende por el árbol respiratorio a través de los bron­ Las condiciónes del medio ambiente favorables
clínicas y laboratoriales de la uncinariasis. Rev Boliv quiolos, los bronquios, la tráquea y la laringe, alean- para el desarrollo y la diseminación del S. stercoralis
Avila R, Guzmán X, Saravia A, Zenteno D, Quiroga A. Ginecol Obste! 1994; 17:60-2.
184 PARAS/TOLOG/A MEDICA ESTRONGILO/DOSIS 185

especie del helminto, el Strongyloidesfi1elleborni, serpiginosos en la piel, lo que se conoce como larva
que es habitual en los monos del Viejo Mundo. currens, similar a las larvas migrantes cutáneas pro­
vocadas por uncinarias de animales (véase el Capí­
Patología tulo 38: Larvas migrantes). Las larvas invaden la piel
a nivel de la región perineal y son extraordinariamen­
En los puntos de entrada cutánea de las larvas te móviles, creando un rash serpiginoso que avanza
filariforrnes, se puede inducir prurito seguido de una muy rápido (más de 5 a 10 cm/hora), casi a la vista
pequeña pápula y edema. Al pasar por el pulmón, las del médico que examina, y su duración es sólo de
larvas ocasionan destrucción de alvéolos, engrosa­ horas o días. Las zonas más afectadas son las na!- .
miento de tabiques interalveolares y de bronquiolos, gas, las ingles y el tronco. Se diferencia del rash de
infiltración celular especialmente de eosinófilos, las larvas migrantes cutáneas fundamentalmente
HOMBRE transudado de plasma y pequeñas hemorragias. La porque en ésta se comprometen las extremidades y
Piel invasión intestinal se puede acompañar de un au­ la zona de piel por donde penetraron las larvas, el
AMBIENTE mento de la actividad peristáltica del intestino. Fre­ avance del camino serpiginoso es más lento (alrede­
cuentemente, la mucosa intestinal no presenta alte­ dor de 1-2 cm/día) y evoluciona en un mayor tiempo,
, .:.(ru.:yi¡S,;;:. ' raciones de importancia; pero a veces se describe habitualmente algunas semanas, antes de extinguir­
r!Í�bdi!!fürm?� una enteritis catarral, edematosa y ulcerosa. Las se. Además y en relación con la piel, en ocasiones
formas ulcerosas suelen afectar extensas zonas del se ha descrito una urticaria crónica inespecífica que
intestino delgado. compromete las muñecas y los tobillos.
La sensibilización frente al parásito se manifiesta Los síntomas pulmonares atribuidos al paso de
I por una intensa eosinofilia tisular y periférica, y por las larvas durante el ciclo de Looss se observan rara
I urticaria crónica. En pacientes sometidos a terapia vez y en este caso, pueden manifestarse desde una
con corticoesteroides, inmunocomprometidos, SIDA, bronquitis asmatiforrne hasta un síndrome de Loefller,
' trasplantados de órganos, neoplásicos, etc., se han
descrito cuadros severos y a menudo fatales debido
propiamente tal.
Los síntomas digestivos se caracterizan por dolor

--�--
l, ú�evos.1--... - _ a una hiperinfección sistémica, con la presencia de que puede ser epigástrico o difuso abdominal y de
larvas en diversos órganos y tejidos, que producen carácter cólico, náuseas, vómitos y diarrea pertinaz.
reacciones inflamatorias o granulomatosas (Figura En infecciones intestinales severas 'y debido a la en­
19-2). teritis ulcerativa producida por el parásito, se produce
un síndrome de malabsorción, con grave trastorno en
Sintomatología la absorción de grasas y vitaminas liposolubles, con
Figura 19-1. Ciclo evolutivo de Strongyloides stercoralis, Las larvas rhabditifonn es expulsadas al exterior con las heces deposiciones esteatorreicas y compromiso progresi­
del hospedero, pueden continuar el ciclo mediante tres caminos: (a) ciclo directo, con fonnación de larvas filarifonnes que Con frecuencia, la estrongiloidosis es asintomá­ vo del estado general. Producto de esta enteritis, el
penetran la piel; (b) ciclo indirecto, cuando en el suelo dan origen a hembras y machos de vida libre, los que generarán tica o provoca escasas molestias. Cuando éstas ·se estudio radiológico permite observar imágenes que
secuencialmente huevos, larvas rhabditifom1es y larvas filarifonnes; y (c) autoinfección o infección endógena, con presentan, la sintomatología se caracteriza por tras­ pueden ir desde edema duodenal con pliegues de la
transfonnación en larvas filarifonnes, sin salir al exterior, Las larvas filarifonnes, luego de hacer el ciclo de Looss, se tornos cutáneos, pulmonares y digestivos, acompa­ mucosa, hasta ulceraciones y otras alteraciones seme­
establecen en el intestino delgado y llegan a adultos, ñados de hipereosinofilia. jantes a la enfermedad de Crohn.
En la piel se produce un eritema muy pruriginoso Los dramáticos casos de infección generalizada,
en el punto de entrada de las larvas. En ocasiones, con hiperinfección por larvas filariforrnes, se presen­
son similares a las requeridas por las uncinarias: subtropicales o templadas, se observa con más fre­ las larvas filariforrnes deambulan creando trayectos tan en pacientes con tratamiento con corticoes-
clima tórrido, con elevada humedad ambiental y un cuencia el ciclo evolutivo directo.
suelo que sea propicio para la generación de las La mantención de la infección en un individuo
formas evolutivas de los parásitos, Por este motivo, y la persistencia de esta infección en personas que
habitualmente es frecuente la infección simultánea han emigrado de zonas endémicas, se explica por el
por ambos nematodos, pero en algunas regiones es mecanismo de autoinfección, en el cual los gusanos
mayor la tasa de infección por uncinarias, aunque parásitos generan una sobreinfección endógena, in­
ocurre lo inverso en ciertas zonas de Brasil y de dependiente del medio ambiente. :·¡
Colombia, El S. stercora/is es un parásito det' hombre, pero !!
Algunas cepas de S, stercora/is tienen preferen­
cia por seguir el ciclo directo y otras, el ciclo indi­
también se produce infección natural en el perro, el
gato y algunos monos como el chimpancé, el oran­
i\
recto de desarrollo. Pero, en apariencia, serían las i
gután y el gibón. Probablemente, la influencia de
condiciones del medio ambiente las determinantes estos hospederos para la infección del hombre sea ;,,
del ciclo escogido, La generación de gusanos de escasa y sólo el perro podría constituir una fuente :+·
vida libre es más frecuente en los climas tórridos, potencial de infección del hombre..
porque las condiciones ecológicas son más favora­ En algunos lugares de Africa (Camerún, Etio­
bles para su desarrollo, En cambio, en las zonas Figura 19-2. Secciones histológicas de intestino delgado con larvas de Strongyloides s/ercoralis en un caso de infección
pía) se presenta la infección del hombre por otra masiva (Cortesía del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica).
ll
� 186 PARAS!TOLOGIA MEDICA ESTRONG/LOIDOSIS 187

teroides, inmunosupresión o desnutrición. En la piel por las heces es mínima e irregular. En infecciones Leeman BJ, Cabrera MR. No association found between
se puede observar un intenso síndrome purpúrico. A moderadas habría unas 25 larvas x g de heces; de allí BIBLIOGRAFIA Strongyloides infestation and asthma. J Asthma 1995;
nivel pulmonar se presenta tos y broncoespasmo, y que en una muestra se detecta alrededor del 30% de 32 (1): 57-62.
en algunos pacientes se puede presentar una enfer­ las infecciones no complicadas, aumenta alrededor Bannon Jp, Fater M, Solit R. Intestinal ileus secondary to Lindo JF, Conway DJ, Atkins NS y cols. Prospective

11!.
1
1 medad pulmonar severa o un síndrome de distrés de 50% con 3 muestras y se aproxima a 100% con 7 Strongyloides stercoralis infection: case report and evaluation ofELISA and immunoblot methods for the
respiratorio del adulto; y el examen radiológico re­ muestras. El rendimiento es mayor si se emplea el review of the literature. Am Surg 1995; 61:377-80. diagnosis of endemic Strongyloides stercoralis infec­
vela infiltrados pulmonares que en todo caso, son cultivo de heces, pero éste es un método caro y sólo Celedon JC, Mathur-Wagh V, Fox J y cols. Systemic tion. Am J Trop Med Hyg 1994; 51:175-9.
¡1';¡, 1 indistinguibles de otras etiologías comunes en 'el disponible en laboratorios de investigación. Una vez strongyloidiosis in patients infected with the human Naquira C, Jiménez G, Guerra JO y cols. Ivermectin for

f!
1 paciente inmunocomprometido. El compromiso di­ encontradas las larvas, deben ser diferenciadas de immunodeficiency virus. A report of 3 cases and re­ human strongyloidiasis and other intestinal helminths.
gestivo comienza en fonna insidiosa con anorexia, las de uncinarias, lo que requiere la necesaria prepa­ view of the literature. Medicine (Baltimore) 1994; Am J Trop Med Hyg 1989; 40:304-9.
;' dolor abdominal progresivo, náuseas, vómitos y dia­ ración del observador. Si las muestras de heces re­ 73:256-63. Robinson RD, Lindo JF, Neva FA y cols. lmmunoepi­

¡
1
i rrea, síntomas que se explican por la masiva inva­ sultan negativas, se recurre a la búsqueda de larvas Chaudhary K, Smith RJ, Himelright IM, Baddour LM. · demiologic studies of Strongy/oides sterco;alis and
sión de la mucosa intestinal por los helmintos. La mediante el Enterotest, en líquido duodenal obteni­ Case report: purpura in disseminated strongyloidiasis. human T lymphotropic virus type Y infections in Ja­
enteritis provoca diversos grados de malabsorción, do por sondeo duodenal. Am J Med Sci 1994; 308:186-91. maica. J Infect Dis 1994; 169:692-6.
esteatorrea, enteropatía perdedora de proteínas y La prueba de ELISA es mejor que otras utiliza­ Datry A, Hilmarsdottir Y, Mayorga Sagastume R y cols. Sato Y, Kobayashi J, Shiroma Y. Serodiagnosis of
hemorragias. Por otra parte, la enteritis con el edema das debido a su sencillez, seguridad y costo. Presen­ Treatrnent of Strongyloides stercora/is infection with Strongyloidiasis. The applications and significance.
y ulceraciones intestinales, facilita la invasión por ta una sensibilidad de alrededor de 85 a 90% y su ivermectin compared with a!bendazole: results of an Rev Inst Med Trop Sao Paulo 1995; 37:35-41.
microorganismos enteropatógenos. También la hi­ especificidad también es elevada, aunque puede dar open study of 60 cases. Trans R Soc Trop Med Hyg Sato Y, Kobayashi J, Toma H, Shiroma Y. Efficacy of
perinfección puede comprometer otros órganos que reacciones cruzadas con filaríosis y esquistosomosis 1994; 83:344-5. stool examination for detection of Strongyloides infec­
normalmente no están involucrados como el cere­ aguda. Si bien ELISA detecta lgG específica del Haque AK, Schmadig V, Rubin SA, Smith JH. Patho­ tion. Am J Trop Med Hyg 1995; 53:248-50.
bro, hígado y vías urinarias. parásito, no permite suponer la carga parasitaria; genesis of human strongyloidiasis autopsy and quan­ Sen P, Gil C, Estrellas B, Middleton JR. Corticosteroid -
En la hiperinfección por S. stercoralis no es fre­ además, los niveles de anticuerpos pueden permane­ titative parasitological analysis. Med Pathol 1994; induced asthma: a manifestation of limited hyperin­
cuente la eosinofilia elevada, posiblemente debido a cer elevados por mucho tiempo después del trata-· 7:276-88. fection syndrome due to Strongyloides stercoralis.
la inflamación aguda y al uso de corticoides. Aun­ miento, lo que dificulta la diferenciación entre infec­ Gann PH, Neva FA, Gam AA. A randomized tria! of single South Med J 1995; 88:923-7.
que, en general, la eosinopenia es considerada un ción aguda y el periodo postinfección. - and two-dose ivermectin versus thiabendazole for Woodring JH, Halfhill H, Berger R y cols. Clínica! and
signo de mal pronóstico, probablemente sea produc­ treatment of strongyloidiasis. J Infect Dis 1994; 169: imaging features of pulmonary strongyloidiasis. South
to de la brevedad de la enfermedad y de la terapia Tratamiento 1076-9. Med J 1996; 89:10-9.
inmunosupresora más que de la infección parasitaria Gutiérrez Y, Bhatia P, Garbadawala ST y cols. Strongyloi­ Zavala J, Sánchez L, Carillo L y cols. Presentaciones
masiva. Hasta el presente, si bien no se dispone de drogas des stercora/is eosinophilic granulomatous entero­ atípicas de strongyloidiosis: reporte de ocho casos.
1 Podría suponerse que los pacientes VIH positi­ 100% efectivas en el tratamiento de la estrongiloido­ colitis. Am J Surg Pathol 1996; 20: 603-12. Rev Gastroenterol Perú 1994; 14:15-21.
vos debieran ser altamente susceptibles al síndrome sis, se utilizan derivados benzimidazólicos (tiaben­
de hiperinfección por S. stercoralis. Pero por otra dazol y albendazol) y el macrólido ivermectina que
parte, se ha descrito que la infección HTLV-1 se producen curación entre 80- 90% de los casos.
asocia con un aumento de larvas de S. stercoralis en El tiabendazol administrado 50 mg/k/día durante
las heces en pacientes con estrongiloidosis, lo cual 3 días, constituyó por mucho tiempo la única droga

1
estaría relacionado con la supresión, en estos casos, de elección en la estrongiloidosis; sin embargo, sus

i
1
de la respuesta lgE. efectos tóxicos son muy frecuentes (ver el Capítulo
La mortalidad en la estrongiloidosis diseminada 66: Tratamiento de .las Parasitosis y Tablas Tera­
es elevada debido a la hiperinfección parasitaria e péuticas). El albendazol en dosis de 400 mg diarios
invasión bacteriana, asociada a la desnutrición y fa­ por 3 días o de 400 dos veces al día durante 3 días,
llas de las defensas del paciente inmunocompro­ tiene similares efectos curativos con menores efec­
metido. tos secundarios.
La ivermectina en dosis de 100 microgramos/kg
Diagnóstico en dosis única o de 200 microgramos/kg/día por 2
días, ha demostrado eficacia parecida y con buena
El diagnóstico de la estrongiloidosis es comple­ tolerancia.
jo. Clínicamente se sospecha en pacientes que pro­
¡ vienen de zonas endémicas, con manifestaciones
cutáneas, dolor abdominal y diarrea, con eosinofilia
elevada; es decir, elementos muy inespecíficos. De
Prevención

La prevención de la estrongiloidosis es igual a la


1 allí la necesidad del diagnóstico específico mediante de las uncinariasis, dada la similitud de sus mecanis­
la pesquisa del parásito o de anticuerpos. mos de transmisión: evitar la contaminación fecal del
1
El hallazgo de larvas rhabditiformes en las he­ suelo, mejorar la calidad del agua de bebida y de
1 ces es dificil, porque la carga parasitaria es baja en regadío, estimular el uso de calzado y promover una
la mayoría de los individuos infectados y su salida efectiva educación sanitaria individual o general.

!,
Capítulo 20 ENTEROBIOSIS U OX!UR/OSIS 189

ENTEROBIOSIS U OXIURIOSIS
///
ANTONIO ATIAS

METODO De GRAHAM
A

Definición. Infección habitualmente delipo fa­ Biología


miliar producida por el E11terobi11s vermicularis,
nematodo de dificil erradicación, conocido vulgar­ El E11terobi11s vermic11laris es un pequeño nema­
mente como oxiuro o "pidulle", que produce diver­ todo blanquecino y delgado como un hilo (Figura
sas molestias, entre las que se destacan el prurito 20-1 y 20-2). La hembra mide alrededor de 1 cm y
anal y las perturbaciones nerviosas. el macho 0,5 cm de longitud por 0,4 y 0,6 mm de
Sinonimia: oxiuriasis, pinworm o threadworm. diámetro, respectivamente. La extremidad anterior
termina en una expansión cuticular, la cual puede
HUEVO
henchirse con líquidos tisulares, sirviendo al gusano ·1,,
como medio de fijación a la mucosa del intestino
(Figura 20-3 y Lámina 13). A una boca formada por
labios que pueden expandirse, continúa un poderoso
esófago y el resto del tubo digestivo. Su extremidad
posterior es aguzada (de allí su nombre de "oxiuro"
= cola aguzada), que en la hembra es recta y, en el
macho, enroscada. El resto de su estructura interna
está formada por un aparato genital muy desarrolla­ Figura 20-3. Extremidad anterior de Enterobius venni­
do. Si efectuamos un corte transversal, observamos cu/aris con su expansión cuticular.
las expansiones alares, delgadas franjas de cutícula
que recorren, de derecha a izquierda, todo el cuerpo
des biológicas que presenta la hembra grávida y los
del gusano; la musculatura se dispone en gruesos
huevos (Figura 20-5). Después de la cópula, los
haces. Los huevos son translúcidos, con una cara
machos son eliminados con las heces y las hembras
plana y otra c,onvexa, de 50 a 60 µm y 30 a 30 µm Figura 20-4. Huevos de Enterobius vermicularis. (A) Mé­
grávidas, en vez de colocar sus huevos en el lumen
en sus diámetros mayor y menor, y contienen una todo de diagnóstico basado en un trozo de cinta de celofán
intestinal para su eliminación al medio exterior con
larva en su interior (Figura 20-4 y Lámina 14). engomado. (B) Aspecto de los huevos observados por dicho
las heces del hospedero, como hacen otros helmin­
Su hábitat está en el ciego, aunque se le suele método.
tos parásitos, emprenden una larga peregrinación a
encontrar en la parte terminal del íleon y en el colon
lo largo de todo el intestino grueso y atraviesan el
ascendente. Por medio de su expansión cuticular se
2-5 mm esfinter anal. En el ambiente exterior, disminuyen su diseminan en la ropa interior y de cama, el suelo y
adhieren a la mucosa y permanecen adosados a la
movilidad, sufren violentas contracciones que rema­ otras superficies.
pared del intestino.
tan con la eliminación de los huevos, los cuales son El hombre se infecta a través de la vía digestiva
El ciclo evolutivo del oxiuro se diferencia de los
colocados en grupos y aglutinados con una sustancia por ingestión e inhalación de los huevos del parásito.
demás helmintos intestinales por las particularida-
pegajosa que los adhiere momentáneamente a la Los jugos digestivos disuelven sus envolturas y la
región perineal y cara interna de los muslos, alcan­ larva se desarrolla a nivel del ciego, diferenciándose
zando un área hasta de 6 cm del ano. Esta migración en macho o hembra. La vida del oxiuro en el intes­
de las hembras y la postura de huevos ocurre en las tino es de alrededor de tres meses.
últimas horas de la tarde y en la noche. Luego de la Además de la vía digestiva, se ha descrito la
postura, la hembra muere. infección directa por vía rectal o retroinfección: al­
Si bien los huevos larvados no son infectantes en gunos huevos colocados en la región perineal, esta­
el momento mismo ge la postura, presentan una llan y las larvas resultantes pueden migrar al intesti­
maduración extraordinariamente rápida, pues nece­ no a través del esfinter anal y luego de recorrer el
sitan sólo de unas seis horas a la temperatura del colon se instalan en el ciego, alcanzando allí su ma­
cuerpo y de unas treinta y seis horas a 20 ºC para durez.
llegar a ser infectantes. Cada hembra de oxiuro
coloca alrededor de 11.000 huevos, muy livianos, Epidemiología
Figura 20-1. Esquemas de macho, hembra y huevo de los cuales, luégo que se ha secádo Já sustancia aglu­
Enterobius vermicularis. Figura 20-2. Ejemplares de Enterobi11s vermicularis. tinante que los mantenía adheridos a la piel, se La enterobiosis se encuentra ampliamente dis-
ENTEROB/OS/S U OX/UR/OS/S 191
}90 PARASITOLOGIA MEDICA

lnlestino grueso tribuida en todo el mundo. La biología tan particu­ existencia de algún grado de inmunidad alcanzado
lar del E. vermicularis contribuye a la creación de con la edad, el cual no ha sido determinado hasta
Adultos focos de contaminación alrededor del hospedero in­ ahora.
fectado, siendo muy frecuentes las reinfecciones o Probablemente, los niños que practican la
las sobreinfecciones y la infección intrafamiliar o onicofagia tengan mayor probabilidad de rein­
de convivientes, ya sea en el hogar o en estableci­ fectarse, siendo frecuente esa manía entre los in­
mientos con régimen de internado (colegios, asilos, fectados por E. vermicularis.
guarderías de niños, etc.). Los huevos contaminan Por las particularidades biológicas de este pará­
extensas áreas del hogar, los servicios higiénicos, la sito, se pueden infectar diversos grupos de la pobla­
Huevos Región ropa de cama y pijamas, los jabones, las toallas, los ción independientemente de las c o ndiciones
Intestino
Larvas larvados periannl juguetes, etcétera. socieconómicas y de la higiene ambiental. En efecto,
·, delgado
La hembra del gusano, al colocar sus huevos en la calidad de la eliminación de las excretas poco
1 HOMBRE influye en la diseminación de la infección, porque en
! la región perianal durante la noche, contamina la
!
·1':: AMBIENTE
ropa interior y de cama. Así, la fuente principal de la
contaminación en el hogar está constituida por los
ellas no se encuentran los huevos del oxiuro. Esta es
una diferencia epidemiológica fundamental entre la
dormitorios. El intenso pmrito anal hace que, por el enterobiosis y las demás enteroparasitosis.
rascado, se contaminen las manos y las uñas y, así, Los huevos de E. vermicularis, diseminados en
fácilmente, se completa el ciclo de reinfección ano­ el polvo ambiental, mantienen su capacidad infec­
mano-boca durante el sueño. Por otra parte, a la tante durante algunas semanas o meses y, luego, las
mañana siguiente, al hacer las camas y sacudir las larvas contenidas en su interior no son capaces ya de
sábanas, los huevos se diseminan por toda la casa y, desarrollarse en el hospedero. Por otra parte, la via­
especialmente, por los dormitorios y el cuarto de bilidad de los huevos en el medio ambiente varía
baño. En muestras de polvo recogidas en casas de según la temperatura, la humedad y las radiaciones
oxiurióticos, suelen encontrarse huevos en la ropa ultravioletas. Se ha descrito la acción letal de las
de cama, el suelo, los muebles y en los sitios eleva­ temperaturas elevadas, una humedad ambiental baja
dos de las habitaciones, como el dintel de puertas y y la acción directa de los rayos solares sobre los
ventanas, y en el baño. Los huevos, bajo el impulso huevos del parásito. Los insecticidas y desinfectan­
de las corrientes de aire, prácticamente flotan por tes comunes no tienen acción contra los huevos en
más de dos minutos antes de posarse sobre alguna las dosis en que se usan habitualmente.
superficie. El origen de la contaminación del hogar
radica- seguramente, en el polvo contaminado que Patología
los niños pueden llevar desde los sitios de juego o de
sus colegios, e iniciar así la infección de todo el La parasitación por E. vermicularis no produce
gmpo familiar. La ingestión de verduras y de fmtas lesiones macroscópicas en el intestino.
contaminadas con huevos de oxiuro constituye otra El prurito anal, nasal y vulvar se explica por un
fuente de infección. estado de hipersensibilidad del hospedero. Además,
La forma infectante es el huevo larvado. La vía debe contribuir al prurito anal la acción mecánica
de infección más importante es la oral, por la inges­ de reptación de los gusanos hembras en el momento
tión e inhalación de los huevos, sea directamente del de la postura de los huevos. Posiblemente, este mismo
polvo de las habitaciones contaminadas o por inges­ estado de hipersensibilidad sea el responsable de los
tión de alimentos contaminados. Otra vía de infec­ síntomas nerviosos y de los trastornos del sueño.
ción es la rectal, por el mecanismo de la retroinfección Es común la presencia de oxiuros y de tricocéfalos
o retroflexión, mecanismo perfectamente compro­ en apéndices extirpados por una apendicitis aguda
bado, pero cuya exacta importancia en la disemina­ (Figura 20-6). El cuadro quirúrgico no es producido
ción de la enterobiosis no es fácil de evaluar. directamente por los parásitos; a lo más, los gusanos
No existe diferencia en la infección por sexo, pueden provocar microtraumatismos en la pared
especialmente en la primera infancia; pero llegada apendicular y constituir, así, una puerta de entrada
la edad puberal, las tasas de infección se mantienen a los gérmenes luminales, los cuales son, en último
en los niños y decrecen en las niñas, debido a que término, los que desencadenan la inflamación del
éstas, en general, observan con mayor precocidad órgano.
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que los varones, las reglas de higiene. En los adul­ En el aparato genital femenino, además del pm­
tos, la infección es semejante en ambos sexos, pero rito vulvar y de la inflamación de la vagina (colpitis)
es de observación corriente que muchos adultos con producción de leucorrea, se han descrito com­
parecen no infectarse aun cuando estén sometidos a plicaciones más serias, aunque poco frecuentes. Las
ambientes contaminados; tal vez esto se deba a ra­ hembras grávidas pueden introducirse por la vulva,
zones de higiene personal, aunque se sospecha la ascendiendo por la vagina, el útero y las trompas,
Figura 20-5. Ciclo evolulivo y mecanismos de transmisión del Enterobius vermicularis.
f92 PARAS/TOLOGIA MEDICA ENTEROB/0S/S U OX/URIOS/S 193
ces con un rendimiento deficiente en los estudios, Tratamiento específico. Se dispone de tres bue­ El tratamiento debe extenderse a todo el grupo
que hace a sus profesores tildarlos de flojos. De esta nos medicamentos con similar eficacia terapéutica, familiar, recibiendo simultáneamente, cada miem­
forma se conducen durante el día, de modo que lle­ útiles en una sola dosis: los derivados benzomida­ bro, la droga. Conviene recomendar la necesidad de
gan cansados y agotados a la noche siguiente, para zólicos y el pamoato de pirantel. cambio de sábanas y de la ropa de dormir y aconse­
reiniciar este tormento. Los benzomidazólicos, fundamentalmente el me­ jar su exposición al sol o a la acción de una plancha
Los síntomas digestivos, los dolores abdomina­ bendazol y el albendazol, actúan sobre los gusanos caliente.
les y los trastornos del tránsito no son de observa­ impidiendo la utilización de glucosa, lo que implica
ción frecuente en esta parasitosis. una depleción de glucógeno y una disminución de
la formación de ATP, esenciales para la supervi­ BIBLIOGRAFIA
Diagnóstico vencia y reproducción del parásito. El pirantel ac­
túa bloqueando el sistema neuromuscular e Bahader SM, Ali GS, Shaalan AH, Khalil HM, Khalil NM.
La sospecha clínica está basada en el prurito anal inmovilizando a los gusanos. Effects of Enterobius ver111ic11/aris infection on
y nasal, acompañado de molestias nerviosas. Si se La prescripción de estos medicamentos es en dosis intelligence quotient (I.Q.) and anthropometric mea­
Figura 20-6. Sección histológica de un apéndice con un comprueba la existencia de más de un miembro del única por un día: surements of Egyptian rural children. J Egypt Soc
oxiuro en su interior. grupo familiar o convivientes que presenten sínto­ - Mebendázol 200 mg (adultos y niños). Parasitol 1995; 25:183-94.
mas parecidos, la sospecha de la parasitosis es aún - Albendazol 400 mg (adultos y niños). Chung DI, Kong HH, Yu HS, Kim J, Cho CR. Live female
mayor. - Pamoato de pirantel 750 mg (adultos) y 10 Enterobius ver111ic11/aris in lhe posterior fomix of the
hasta alcanzar el peritoneo a través de las franjas de El diagnóstico de certeza se efectúa mediante el mg/kilo de peso (niños). vagina of a Korean woman. Korean J Parasitol 1997;
la trompa. El peritoneo engloba allí al helminto como hallazgo de los gusanos o de sus huevos. Los gusa­ 35:67-9.
a un cuerpo extraño y se produce una peritonitis nos se identifican por su pequeño tamaño, su color Medidas higiénicas personales. Conviene ins­ Daly J, Baker GF. Pinwonn granuloma of the liver. Am J
plástica localizada que ha obligado a intervenciones blanquecino y su aspecto filiforme, lo que los dife­ truir a los enfermos sobre la biología y ciclo evolu­ Trop Med Hyg 1984; 33:62-4.
quirúrgicas para extirpar un granuloma inflamatorio, rencia de otros helmintos, proglótidas o larvas de tivo del parásito, aconsejándoles aquellas medidas Koltas IS, Ozcan K, Tamer L, Aksungur P. Serum copper,
en cuyo centro se observa el oxiuro repleto de hue­ moscas, los cuales también pueden encontrarse en que eviten la diseminación de la infección en el ámbito zinc and magnesium levels in children with entero­
vos. Iguales lesiones se han descrito en el hígado y las inmediaciones de la región perineal o en las de­ hogareño. Especialmente debe insistirse en que man­ biosis. J Trace Elem Med Biol 1997; 11:49-52.
en otras vísceras. posiciones. tengan sus uñas cortas y que se cepillen con frecuen­ Liu LX, Chi J, Upton MP, Ash LR. Eosinophilic colitis
La búsqueda de huevos se efectúa mediante la cia sus manos. Si existe, combatir la onicofagia. associated with larvae of the pinwonn Enterobius
Sintomatología prueba de la cinta adhesiva de papel transparente o ver111ic11/aris. Lancet 1995; 346: 410-2.
método de Graham. Esta cinta o papel scotch, debe Medidas sanitarias generales. Se dirige a eli­ O'Brien TJ. Pediatric vulvovaginitis. Australas J Denna­
Los síntomas cardinales de la enterobiosis son de aplicarse efectuando repetidas locaciones en la re­ minar el ambiente oxiuriótico que rodea a las perso­ tol 1995; 36:216-8.
dos tipos: el prurito y los síntomas nerviosos. gión perineal, alrededor del ano y en los pliegues nas infectadas. Es recomendable efectuar un minu­ Symmers WST C. Pathology of oxyuriasis with special
El prurito es principalmente anal, nasal y vulvar. interglúteos y, luego, colocarse sobre un portaob­ cioso aseo de las paredes y de los pisos en dormito­ reference to granulomas due to the presence of O:cyuris
El prurito anal es de predominio nocturno, especial­ jetos. Conviene hacer esta maniobra al despertar el rios y cuartos de baño, cambio periódico y uso indi­ vermicularis (E. v.) and its ova in the tissues. Arch
mente cuando el hospedero está en la cama, dormido paciente y antes del aseo matinal. El examen se efec­ vidual de toallas, limpieza de juguetes, etcétera. Pathol 1950; 50:475-516.
o en vías de dormirse; es de intensidad variable, pero túa diariamente, usando una placa, hasta completar
suele obligar a rascarse con desesperación. Al obser­ cinco o siete días en total. Los huevos atrapados en
var la región perineal, es común la presencia de la cinta adhesiva se conservan largo tiempo y se
gusanos con activos movimientos de reptación. Fue­ pueden observar fácilmente al microscopio.
ra de esta localización principal, y casi tan frecuente El examen de las deposiciones es de bajo ren­
como ella, es el prurito nasal, también desesperante. dimiento en la enterobiosis, porque los huevos ha­
Es de creencia popular relacionar la picazón nasal bitualmente no se encuentran en las heces, salvo si
con la parasitación por gusanos. Las niñas con oxiuros algunas hembras son destruidas antes de alcanzar
suelen presentar un prurito mlvar muy intenso, que las márgenes de ano. Por ello, sólo uno de cada
obliga a consultar al médico. Casi siempre se acom­ cinco o diez infectados oxiurióticos presenta hue­
paña de leucorrea, de modo que los especialistas se vos del helminto en sus heces.
plantean el diagnóstico diferencial entre enterobiosis Para un estudio racional de la infección y de su
y vulvovaginitis inespecífica o por tricomonas. erradicación, es aconsejable extender el diagnóstico
Los síntomas nerviosos son variados y derivan a todos los convivientes del grupo familiar o institu­
de las alteraciones del sue1io nocturno y sus lógicas cional, con preferencia a los niños.
consecuencias diurnas. Los niños sufren especial­
mente de insomnio, o bien, si han conciliado el sue­ Tratamiento y profilaxis
ño, se mueven inquietos en la cama, hablan dormi­
dos o tienen pesadillas e, incluso, llegan al sonambu­ La terapéutica racional comporta:
lismo; muchos presentan brw,:ismo o acto de hacer a. Tratamiento específico
rechinar los dientes mientras dliennen. Al día si­ b. Medidas higiénicas personales
guiente, los niños aparecen pálidos, ojerosos, de c. Medidas sanitarias generales
aspecto apático, o bien, están inquietos, muchas ve-
� Capítulo 21

TENIASIS
l TENIASIS
195

ELSARUGIEROeISABELNOEMI

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Definición. Infección por formas adultas de ces­ de replicación del parásito. La unión lineal de las
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todos del género Taenia (Taenia saginata y Taenia proglótidas forma una larga cadena o estróbila, la
solium) que se desarrollan en el intestino delgado de que constituye el cuerpo del cestodo. Cada progló­
su único hospedero definitivo, el hombre. Los hos­ tida, estructura única entre los metazoos, es a la vez
pederos intermediarios naturales son los ani aJi:s en unidad de alimentación y reproducción, ya que estos
cüyostej1 os se alojan los metacestodos o formas gusanos son hermafroditas. Su sistema de alimenta­
larvales (cisticercos), que en Taenia saginata es el ción es rudimentario, carecen de órganos especiali­
vacuno y en Taenia solium, es el cerdo. El hombre zados, absorbiendo los nutrientes a través del tegu­
puede sertambiéri hospedero intermediarioacciden­ mento de las proglótidas por osmosis y pinocitosis,
tal de cisticercos de T. solium que pueden causarle para lo cual el tegumento está recubierto por sole­
una grave enfermedad, la cisticercosis humana (véa­ vantamientos o microtricos que aumentan su super­
se Capíiuio 40: Cisticercosis). ficie de absorción.
En ambas especies, las proglótidas más cercanas
Biología al cuello son pequeñas e inmaduras y a medida que
en su interior van madurando los órganos repro­
Taenia saginata y Taenia soliu'm son platel­ ductores de ambos sexos, avanzan hacia el extremo
mintos de la clase Cestoda, familia Taenidae, cuyas distal, siendo reemplazadas por nuevas proglótidas
caracteristicas biológicas ya fueron comentadas (Fi­ inmaduras. Este proceso culmina en las proglótidas
gura 1-8) (véase Capítulo 1: El parásito). En su grávidas, que se ubican al final de la cadena. Se
etapa adulta, la T. saginata o "tenia del vacuno" diferencian así a Jo largo de la estróbila,proglótidas
mide de 5 a 8 m de longitud (Figura21-1). Su extremo inmaduras, maduras y grávidas.
anterior llamado escólex mide de 1 a 2 mm de diáme­ En T. saginata, las proglótidas grávidas son
tro y tiene forma cuadrangular, lo que está dado por rectangulares, de 1,5 a 2,2 cm de largo por 1 cm de
el tamaño y distribución de sus órganos de fijación ancho, dotadas de fuerte musculatura, por la que
(cuatro ventosas acetabulares, prominentes). Care­ pueden reptar y forzar el esfinter anal, salir al exte­
ce, en cambio, de corona de ganchos, de allí su rior con las heces o ser expulsadas en forma inde­
nombre saginata que significa "inerme". Por esta pendiente, causando alarma y desagrado en el pa­
razón se propuso separar la especie saginata en un ciente.
género aparte, denominado Teaniarhynchus sagi­ Las proglótidas grávidas de T. solium son más
natus. pequeñas, más bien cuadrangulares (0,7 x 0,5 cm) y
La Taenia solium o "tenia de cerdo" mide de 3 a menos musculadas, por lo que menos frecuentemen­
5 m de longitud, posee un escólex más pequeño, de te salen al exterior en forma aislada. Cada proglótida
0,5 a 1 mm de diámetro, piriforme, de cuatro ventosas madura tiene plenamente constituidos los sistemas
y una eminencia retráctil, el roste/o en el que se genitales de ambos sexos, con sus conductos termi­
asientan dos a tres docenas de pequeños ganchos nales unidos en el poro genital. La fecundación se
de dos diferentes tamaños, dispuestos en doble realiza entre proglótidas próximas, favorecida por los
corona, dándole su aspecto caracteristico y al que movimientos peristálticos normales del intestino. Una
debe su nombre de solium o armada (Lámina'l5). vez fecundada, en la proglótida ahora grávida, los
El escólex, este pequeño órgano, mantiene al órganos sexuales masculinos involucionan y el úte­
gusano fijado a la mucosa intestinal. Se continúa por ro se repleta de huevos. En ambas especies, el aspec­
una zona pequeña, relativamente indiferenciada, lla­ to del útero es característico: un vástago central
mada cuello que es el órgano generatriz de las uni­ recorre la proglótida en toda su longitud y de él se
dades anatomofuncionales, las proglótidas. desprenden ramificaciones laterales. $e denominan
En la zona del cuello hay células totipotenciales primarias las que emergen directamente del vástago ._,..., ,t"'_f · F
de gran actividad metabólica y por tanto, muy sen­ y secundarias o terciarias las ramificaciones sucesi­ Fig�r� 21-1. Ten_iasis. (A) Escólex de Taenia oli11111. (B) Escólex dé Taenia
sibles a la acción de fármacos que actúan en las fases vas· de las primarias. _ � _ saginata. (C) Huevo de Taenia sp. (D)
Es trob'.la de Taema sª?""'ta al fresco. (E) Proglot1da madura de Taenia soli11111, con menos de 12 ramificaciones uterinas
_ .
prnnanas. (F) Proglot1da de Taenia saginata, con más de 12 ramificaciones uterinas.
,. ��.-1··: 'I

f96 PARASITOLOGIA MEDICA TENIASIS 197

1 ntestino delgado
Adultos
} Intestino delgado
Adultos
� i
:\·.:

,------'----�
�- --------
Prog)ótidas grávidas Heces Embrión Proglótidas grávidas Heces
Huevos hexacanto Huevos
HOMBRE 'HOMBRE
CARNIVORISMOt------------=-------=-1 FECALISMO CARNIVORISMO 1===--=====-=-====-==---==-===- ==========1 FECALISMO
VACUNO CERDO- � - - - - - - ...

Cisticercos Cisticercos
Tejidos Tejidos

Figura 21-3. Ciclo evolutivo de Taenia so/ium. El hospedero definitivo es el hombre al albergar al parásito adulto en
Figura 21-2. Ciclo evolutivo de Taenia saginata, El hombre alberga al parásito adulto en su intestino y es el hospedero su in,testino. Elimina proglótidas maduras o huevos al ambiente exterior. El hospedero intermediario es el cerdo al ingerir
definitivo. Por fecalismo, se contamina el ambiente exterior, El vacuno, hospedero intermediario, ingiere huevos al pastar por fecalismo huevos de la tenia y formar en sus tejidos el Cysticercus ce/lulosae, forma larval o metacestodo. El ciclo
y desarrolla la forma larval (metacestodo), Cysticerc11s bovis, en sus tejidos, El ciclo se completa cuando, por se completa cuando, por camivorismo, el hombre ingiere cruda, carne de cerdo infectada. El hombre, al igual que eJ.
camivorismo, el hombre ingiere cruda, carne infectada de vacuno. cerdo, puede convertirse también en hospedero intermediario, puesto que puede infectarse con los huevos de la lombriz
y desarrollar una cisticercosis en sus tejidos.

Comprimiendo una proglótida de T. saginata que, al encontrarlos durante el examen de las heces
entre dos portaobjetos y observándola al trasluz o de una persona infectada, se informa la presencia cerdo para T. solium. Se ignora la razón por la cual de espesor) y translúcida. La visión de su superficie
con la ayuda de una lupa, se pueden contar a un lado de huevos de Taenia sp. (Lámina 16). sólo los huevos de T. solium pueden infectar al con microscopia electrónica de barrido ha permitido
del vástago central de 15 a 30 ramificaciones prima­ Estas especies parasitarias aseguran su manten­ hombre, transformándolo en un hospedero interme­ identificar una cubierta de microvellosidades de di­
rias (siempre más de doce) lo que permite hacer el ción en la naturaleza por su alto potencial biótico. diario accidental y provocándole la cisticercosis. ferentes tamaños, por lo cual su forma no es rígida
diagnóstico diferencial de especie con T. soliwn en Cada proglótida puede contener miles de huevos y al depositarlos en una superficie plana tienden a
cuyas proglótidas se cuentan 8 a I O ramificaciones (hasta 80.000) que son inmediatamente infectantes Ciclo biológico. Se inicia con la ingestión de extenderse; aunque en el ojo y otros parénquimas
primarias (doce o menos), En general la estróbila de para los hospederos intermediarios. Bajo condi¡;io­ huevos por el vacuno o el cerdo. Bajo la acción de pueden ser esféricos. La transparencia de la cápsula
T. sagina/fl tiene entre 1.000 a 2.000 proglótidas y la nes geoclimáticas favorables, los huevos pueden los jugos digestivos se produce la eclosión de los permite visualizar en su interior una masa algo más
de T. so/ium menos de 1.000. permanecer viables en el ambiente por meses y hasta huevos y por la digestión de sus cubiertas se liberan densa, blanquecina, que corresponde al escólex
Los huevos que repletan el útero miden 30 a 45 por 335 días a 4 ºC. y activan las oncosferas que, mediante sus ganchos invaginado de la especie adulta a la que pertenece el
µm de diámetro, son esféricos u ovoides, con una y secreciones líticas, penetran la pared del tubo di­ cisticerco. Esta masa tiene movimientos propios, de
gruesa corteza radiada de color café que contiene Ciclo evolutivo de ambas tenias. Las teniasis gestivo y por vía sanguinea o linfática se diseminan allí su nombre de cisticercus, que quiere decir quiste
la oncosfera o embrión hexacanto con seis ganchos son ciclozoonosis, ya que requieren obligatoria-, por todo el organismo del animal, desarrollándose el con cola
refringentes, ordenados en haz, en su interior. Los mente dos hospederos vertebrados diferentes para cisticerco en un plazo de 60 a 90 días. La fuente de infección de teniasis para el hombre
huevos salen al exterior en las heces, puesto que mantenerse en la naturaleza (Figuras 21-2 y 21-3). Los cisticercos de ambas tenias son morfo­ es la carne cruda o insuficientemente éocida de va­
los movimientos de las proglótidas pueden favore­ El hospedero definitivo natural de ambas teniasis lógicamente semejantes (Figura 40-1). Se presentan cuno o cerdo que contiene a la forma infectante, los
cer su vaciamiento dentro del intestino, o ser-ex­ es el hombre; en !=Uyo intestino delgado se desarro­ como p�queñas vesículas quísticas d�,Q,5 a 1 cm. de cisticer�os, los que deben ser ingeridos para que la
pulsados COIJ éstfil; al exterior. Su aspecto miÚcis:. ' llan los ejefuplares"adultos. Los hospederos interme­ ·en
diámetro, con líquido transparente su'interior.ªSu iiccióri'de los jugos gástricos, sales biliares y secre­
cópico 110 permite diferenciar las especies por lo diarios naturales son el vacuno para T. saginata y el pared externa o cápsula es muy delgada (0,6 a 2,5 µm ciones pancreáticas activen la larva encapsulada,
..198 PARASITOLOGIA MEDICA TENJASIS 199

evaginándose el escólex, el que se fija a la mucosa transmisión de esta zoonosis, ya que contamina el Síntomas generales. Los más comunes son las tos que ayudan a plantear la sospecha clínica. El
del intestino delgado por sus ventosas y/o ganchos. ambiente con los huevos de estos helmintos, que alteraciones del apetito, y aunque tradicionalmente diagnóstico de certeza, se hace al visualizar las
Una vez fijado, el cuello del helminto inicia la gene­ elimina en sus heces. El saneamiento ambiental bá­ se asocia esta parasitosis con bulimia o aumento del proglótidas grávidas, las cuales deben ser recogidas
ración de proglótidas hasta constituir, en cinco a sico deficiente, especialmente la inadecuada canali­ apetito y baja de peso simultáneamente, es más fre­ y depositadas en agua o suero fisiológico. Para la
doce semanas, la tenia adulta que es capaz de expul­ zación de las excretas humanas, así como la falta de cuente observar anorexia o disminución del apetito, recolección de las proglótidas es indispensable el
sar proglótidas grávidas, repletas de huevos y reini­ tratamiento de las aguas servidas que se usan en el así como marcada astenia y adinamia. empleo de guantes, y un prolijo aseo de manos, ya
ciar el ciclo. La tenia adulta puede vivir hasta 30 años regadío, favorece la mantención de esta parasitosis Síntomas digestivos. Se describe dolor abdomi­ que si se trata de T. solium se corre el riesgo de
de no mediar tratamiento médico. en la naturaleza. nal especialmente epigastralgias, náuseas predomi­ adquirir la cisticercosis.
Por otra parte, el potencial biótico de estos hel­ nantemente matinales y constipación o diarrea. Para el diagnóstico de la especie de tenia en las
Epidemiología mintos es muy grande y está directam�nte relaciona­ Síntomas psicosomáticos. Son los más impor­ proglótidas grávidas, se debe contar el número de
do con su longevidad, el número de proglótidas tantes en esta parasitosis. La irritabilidad y el cam­ ramificaciones uterinas primarias que emergen a ca­
Es una infección cosmopolita, de prevalencia expulsadas por día, el número de huevos que contie­ bio de carácter son frecuentes, inducidos tal vez da lado del vástago uterino central: si tienen más de
variable, puesto que su transmisión depende, en ne cada proglótida y su viabilidad en los diferentes por la eliminación de proglótidas, pero a veces, es­ 12 ramificaciones se trataría de T. saginata y si son
gran medida, de las tradiciones culinarias de los sustratos y condiciones ambientales. Cada persona tos trastornos preceden a la eliminación de trozos menos, T. solium. Este procedimiento se hace com­
pueblos, las que a su vez están influenciadas por el parasitada puede eliminar hasta 700.000 huevos al de la lombriz. Otro hecho muy frecuente, es la sen­ primiendo la proglótida entre dos portaobjetos y
acceso económico al consumo de carne animal, así día, los que son inmediatamente infectantes y resis­ sación de vergüenza que siente el paciente al sa­ observándola al trasluz a simple vista o con lupa.
como por factores geoclimáticos, culturales y religio­ tentes a diferentes condiciones geoclimáticas, lo que berse parasitado, lo cual no tiene explicación satis­ Recientemente se ha comunicado la prueba de
sos. En el mundo destacan las elevadas prevalencias hace dificil el control de esta parasitosis. factoria. A veces los enfermos comienzan a eliminar ELISA para la detección de antígenos fecales espe­
en China y las naciones eslavas. En nuestro conti­ proglótidas y se lo o·cultan a sus familiares más cíficos de Taenia y las técnicas de biología molecu­
nente constituye un importante problema de salud Patogenia cercanos. Otros piensan que su enfennedad es de lar (PCR), que identifican el material genético del
pública en México y Perú. origen venéreo. cestodo en las deposiciones, técnicas que se hallan
Un amplio estudio de prevalencia en población Tal como su denominación popular de "lombriz Síntomas alérgicos. Es frecuente el prurito, es­ en plena evaluación, con resultados promisorios.
general del área norte de la ciudad de Santiago de solitaria" lo indica, la mayoria de las infecciones por pecialmente anal. Rara vez se observa urticaria u El examen coproparasitológico y la prueba de
Chile que analizó 70.642 exámenes parasitológicos estas tenias ocurre por un ejemplar único. No obs­ otras manifestaciones de hipersensibilidad. Graham pesquisa huevos de Taenia sp., los cuales
de deposiciones durante el período 1985 - 1994, se tante, se han descrito infecciones masivas por am­ El signo único y característico de esta infección por ser idénticos entre sí, no permiten hacer el diag­
\; determinó una tasa de infección de 86/100.000 y de bas tenias y aunque existe un caso de teniasis es la expulsión espontánea e imprevista de proglóti­ nóstico de especie.
! \os 61 casos detectados, se logró examinar 11 progló­ saginata con 150 ejemplares, es más frecuente obser­ das, lo que ocurre hasta en el 95% de algunas
tidas que correspondieron todas a T. saginata. No var la teniasis múltiple por Taenia solium, probable­ casuísticas. Los trozos del parásito fuerzan el esfin­ Tratamiento
se encontraron diferencias estadísticamente signifi­ mente debido a la ingestión simultánea de un gran ter anal y se deslizan por el periné y las extremidades
cativas respecto al sexo de los infectados por ambas número de cisticercos contenidos en carne de cerdo inferiores, provocando en el paciente una sensación Una vez identificada la infección, es decir, si se
tenias is. masivamente infectada. Se han descrito incluso in­ de asco y vergüenza. trata de T. solium o de T. saginata, se debe proceder
En esta infección, las frecuencias encontradas en fecciones mixtas por ambas tenias. En una casuística de 1.25? personas infectadas, a su tratamiento. En el caso de la primera, se debe
diversos estudios aumentan con la edad, siendo los Los mecanismos de daño en las teniasis son 26 de ellas presentaron síntomas gastrointestinales o hospitalizar al paciente, con las debidas técnicas de
adultos los más afectados, lo que probablemente básicamente tres : psicosomáticos entre los que destacaron por su fre­ aislamiento, para evitar el riesgo de cisticer\:osis.
guarda relación con el mayor consumo de carnes Toxialérgico. Los productos del catabolismo del cuencia, la eliminación de proglótidas (95%), pru­ El tratamiento farmacológico se puede efectuar
insuficientemente cocidas.. parásito pueden ser absorbidos causando algunos rito anal (77%), náuseas (46%), dolor abdominal con prazicuantel o con niclosamida.
En Chile la infección por T. saginata es más de los síntomas generales y digestivos. (45%), apetito aumentado (30%) y cefalea (26%).
frecuente que la infección por T. solium, en una Prazicuantel. Se administra por vía oral. Se
Expoliatriz. Corresponde a la sustracción de En raras ocasiones, se han descrito complica­
proporción de ocho a diez casos por uno, respecti­ absorbe bien. Su mecanismo de acción es aumentar
nutrientes contenidos en el quimo digestivo del hos­ ciones obstructivas en intestino, vía biliar y apéndi-
vamente. Se supone que en la mayor frecuencia de la permeabilidad al calcio por parte del parásito, lo
pedero. El daño que causan las tenias por este me­ ce producidas por ejemplares adultos, proglótidas
T. saginata influye por un lado, la preferencia de la
cual afecta su musculatura provocándole una con­
canismo no es el más destacado. y/o huevos de tenias y se ha descrito un caso de un
población chilena por el consumo de carne de vacu­ Irritativo. El efecto de la adhesión del escólex a absceso tubo-ovárico. Pero, sin duda, la complica­ tracción generalizada con una consecuente paráli­
no y por otro, que la cisticercosis del vacuno, por ser sis; daña además sus tegumentos. Su empleo se
la mucosa intestinal sería capaz, en algunos casos, ción más frecuente y potencialmente más grave de la asocia ocasionalmente a síntomas digestivos vagos,
ésté un animal de gran tamaño, pasa inadvertida a la de provocar una leve inflamación catarral. T. solium, es la cisticercosis, patología que debe ser
inspección médico-veterinaria. Por su parte, el cerdo descartada en todo paciente portador de esta teniasis cefalea, vértigos, somnolencia, sudoración, fiebre,
es un animal coprofágico y este hábito aunienta sus Sintomatología urticaria e hiperglicemia. Su uso está contraindica­
y en su grupo familiar, ya que el riesgo relativo de
posibilidades de contraer cisticercosis masiva, ha­ do durante el embarazo. Tendria un 100% de ren­
infectarse para una persona que convive con un
ciendo fácil su detección en mataderos. Se destaca dimiento terapéutico. La dosis recomendada es de
Las teniasis producen sintomatología polimorfa, parasitado se calcula en un rango variable de 2,95 a
que esta mayor frecuencia relativa de T. saginata es 9,05 en los diferentes estudios (ver Capítulo 40: 10 mg/kg en una dosis (dosis máxima: 600 mg).
generalmente de poca gravedad. La aparición de los
netamente urbana ya que en las áreas rurales donde síntomas ocurre de manera habitual cinco a doce Cisticercosis). Niclosamida. Se administra por vía oral. Actúa

1
los cerdos son criados, sacrificados y consumidos semanas después de la ingestión del cisticerco. sólo en el lumen intestinal y no se absorbe. Inhibe la
en el ámbito domiciliario, sin pasar por inspección Muchos pacientes son asintomáticos, pero algunos Diagnóstico fosforilación oxidativa mitocondrial del parásito.
médico-veterinaria, la T. so/ium es relativamente más experimentan síntomas psíquicos aún en el período Las dosis totales recomendadas son: en niños de 5-
común. ... ,..

l
prepatente. En general¡ los, síntomas pueden subdi­ El conjunto del cuadro clínico,_ la anan:u;esis, 11 kg; 500 mg; entre 11-34 kg, l000 mg; en niños
Desde el punto de vista· epidemiológico, el hom­ vié!ir1ie en generales;· digestivos, psicosomáticos y los factores de riesgo, los antecederiíés epidemioló­ de más de 34 kg, 1.500 mg y en los adultos, 2.000
bre es un eslabón indispensable en la cadena de alérgicos. gicos y la eliminación de proglótidas, son. elemen- mg.
200 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo22
Se recomienda en la tarde y noche previos al Bordon LM. Intestinal obstruction dueto Taenia saginata DIFILOBOTRJOSIS i
tratamiento, la ingesta de régimen líquido. La dro­ infection: a case report. JTrop Med Hyg 1992; 95:352-
ga se administra en ayunas, y debe ser molida o 3. PATRJCIO TORRES
masticada, y deglutida con agua o té azucarado y se Botero D.Tanowitz HB, Weiss LM, Wittnes M. Taeniasis
administra primero la mitad de la dosis y una hora and cysticercosis. Infec Dis Clin North Am 1993;
después la otra mitad, seguido de un purgante sali­ 7:683-97.
no, el cual puede ser hidróxido de magnesio, una Chung WC, Fan PC, Lin CY, Wu CC. Poor eficacy of
hora_ más tarde. albendazole for the treatment of human taeniasis. Int
Debe esperarse la eliminación espontánea de J Parasitol 1991; 21:269-70.
toda la tenia, ya que el apresurar su eliminación al Díaz SP, Cardil A, Suate V y cols. Epidemiologic study Definición. Infección parasitaria por cestodos D. /atum, al igual que otras especies del género,
tirarla, puede hacer fracasar el tratamiento, al rom­ and control of Taenia solium infections with prazi­ del género Diphyl/obothrium cuyos adultos se desa­ difiere de otros cestodos que se desarrollan en el
per la estróbila y no eliminarse el escólex. cuantel in a rural villageof México. Am JTrop Med Hyg rrollan en mamíferos y/o aves y los estadios juve­ hombre (Taenia spp., Hymenolepis spp. y Dipy­
Se considera curado al paciente cuando elimina 1991;45:522-31. niles se establecen en copépodos y peces teleósteos. lidium caninum) por presentar proglótidas provis­
el escólex o en su defecto, si en un seguimiento de Fan PC, Chun WC, Lin CY, Chan CH. Clinical mani­ La difilobotriosis humana se refiere a la infec­ tas de numerosos folículos vitelógenos y un atrio
dos a tres meses no hay eliminación de proglótidas festations of taeniasis in Taiwan aborigines. J Hel­ ción por adultos de Diphyl/obothrium spp. genital y un poro uterino localizados en la región
o huevos del cestodo, detectados en el examen co­ minthol 1992; 66:118-23. ventral.
proparasitológico seriado. Debe instruirse al pacien­ García HA, Martínez S. Teniasis/Cisticercosis por T. Biología La superficie de los adultos de Diphyl/obothrium
te para la búsqueda de proglótidas luego del trata­ solium. Edil. Universo SA, Lima, Perú, 1996. spp. se encuentra revestida por un tegumento o
miento. Gottstein B, Deplazes P, TannerY, Skaggs JS. Diagnostic Actualmente se reconocen alrededor de ochenta sincicio en cuya superficie se hallan los micrótricos,
identification ofTaenia saginata with the polymerase especies de Diphyllobothrium distribuidas en dis­ estructuras que aumentan el área superficial de ab­
Prevención chain reaction. Trasn R Soc Trop Med Hyg 1991; tintas regiones geográficas. En Chile sólo se han sorción y secreción, y posiblemente facilitan su ad­
85:248-9. denunciado tres especies: Diphyl/obothrium latum, hesión a la mucosa.
Individual. Se logra con la adecuada cocción de Harrison LJ, Delgado J, Parkhouse RM. Differential diag­ Diphyl/obothrium dendritict1111 y Diphyllobothrium El parásito elimina gran cantidad de huevos (50-
carnes de vacuno y cerdo, previa a su ingestión. nosis ofTaenia sagi11a/a and Taenia so/i11111 with DNA pacificum, de las cuales sólo D. /atum y D. pacifi­ 75 µm de largo por 40-52 µm de ancho), a través del
Debe instruirse a los pacientes a defecar en recintos probes. Parasitology 1990; 3:459-6 l . cw11 se han identificado en el hombre. Los comple­ poro uterino, los que presentan forma ovalada y un
en donde no lleguen sus heces a los potenciales Jiménez JA, De Haro I, Rojas G, Salazar PM. Estudio jos ciclos vitales de Diphyl/obothrium spp. se cono­ opérculo en uno de sus extremos (Lámina 18). La
hospederos intermediarios. Además, es de suma cualitativo y cuantitativo de la presencia de oncosferas cen escasamente y en ellos pueden distinguirse los cápsula del huevo, constituida por esclerotina (pro­
importancia el tratamiento de los casos de teniasis, de Taenia solium en el tejido muscular de cerdos con siguientes estadios de desarrollo: adultos - huevos - teína conjugada con moléculas de quinona) es grue­
aunque sean asintomáticos. y sin cisticercosis. Bol Chil Parasitol 1995; 50:51-7. coracidios - procercoides y plerocercoides (véase el sa y lisa. Debajo de la cápsula, existe una envoltura
Mercado R, Arias B. Infecciones por Taenia sp. y otros Capítulo 1: El parásito). externa y otra interna (sincicio) que rodean al cigoto
Colectiva. Se debe insistir en la adecuada elimi­ cestodos intestinales en pacientes de consultorios y y células vitelógenas asociadas. Los huevos, en el
nación de excretas humanas y el tratamiento de aguas hospitales públicos del sector norte de Santiago, Chile Diphyllobothri11m lalllm. E"i estado adulto se momento de ser expulsados con los excrementos,
servidas, a fin de no contaminar el ambiente, y con (1985-1'994). Bol Chil Parasitol 1995; 50:80-3. localiza en el intestino delgado del hombre y otros aún no inician su embriogénesis, para lo cual debén
ello, los potenciales hospederos intermediarios. Fun­ Pairwruti S, Ratanawichitrasin A, Koetsawang A, Robert­ mamíferos ictiófagos (perros, gatos). También se llegar a un medio acuático (rios, lagos), donde en­
damental es el control médico-veterinario de mata­ soil DI. Tubo-ovarian abscess containing tapeworm sabe que en el hemisferio norte son huéspedes algu­ cuentren condiciones favorables de temperatura.
deros, decomisándose las carnes con cisticercosis. proglottids and ova: a case report. J Obstet Gynaecol nos mamíferos silvestres. El hámster (Mesocricetus Luego de la embriogénesis, se desarrolla un estado
Además, se debe prohibir la matanza clandestina del (Japón) 1993; 19:285-90. auratus) se utiliza como importante huésped expe­ larvario que recibe el nombre de coracidio, que
ganado bovino y porcino y propender a la crianza Pawlowski ZS. Efficay oflow doses of praziquantel in taenias. rimental en investigaciones sobre taxonomía, por conserva la envoltura interna del huevo (sincicio),
higiénica del ganado. Actualmente se encuentra en Acta Trop 1990; 48:83-8. ser susceptible a varias especies de Diphyl/obo­ ya provista de cilios, que envuelve una oncósfera
fase de experimentación el uso de vacunas a nivel Salazar P, De Haro l. Biología del binomio teniasis-cisti­ thriwn. con tres pares de ganchos.
veterinario. cercosis. Bol Chil Parasitol 1990;45: 73-6. El parásito adulto mide habitualmente, en el El huevo se desarrolla a temperaturas de 10-
Schantz PM, Cruz M, Sarti E, Pawlowski Z. Potential hombre, 4 -1O m de longitud, pudiendo alcanzar los 30ºC. A 18-20 ºC el coracidio se forma en diez a
erradicability of taeniasis and cysticercosis. Bull Pan 25 m con una anchura máxima de 1,5-2,0 cm. El doce días; a menos de 8 ºC, el desarrollo se inhibe.
BIBLIOGRAFIA Am Health Organ 1993; 27:397-403. escólex habitualmente con forma de espátula, mide Las concentraciones bajas de oxigeno en el agua
Varma TK, Shinghal TN, Saxena M, Ahluwalia S. Studies 2-4 mm de longitud y está provisto de dos botrios no permiten el desarrollo completo del coracidio
Allan JC, Avila G, García J y cols. Immunodiagnosis of on the comparative efficay of mebendazole, fluben­ con los cuales puede adherirse a las vellosidades (metabolismo aerobio); tal desarrollo probablemen­
taeniasis by coproantigen detection. Parasitology 1990; dazole and niclosamide against human taperworm intestinales El cuello mide alrededor de 1 cm de te también se vea influenciado por otros factores
3:473-7. infections. lndian J Public Health 1990; 34:163-8. longitud. El estróbilo presenta entre 2.000 y 4.000 fisico-químicos como pH, concentración de C0, y
proglótidas, en ejemplares maduros de pacientes salinidad.
humanos, más anchas que largas o cuadradas. Aque­ Para que el coracidio se libere de la cápsula del
llas proglótidas en cuyo útero se observan huevos huevo, requiere la presencia de luz, cuya intensidad
1
miden entre 10-15 mm de ancho por 2-5 mm de y longitud de onda influyen sobre el proceso de
¡·.. largo; la forma del útero es variable y presenta va­ emergencia y, probablemente, estimula la libera­
· ...,,:·1.b' rias asas o espiras uterinas, que se extienden•-por
·- · ción de enzimas que desprenden el opérculo. De
delante hasta la zona· dél cirro. esta manera, el coracidio que mide alrededor de 50

_[
.. 202 PARASITOLOGJA MEDICA PARASITOLOGIA CLINJCA 203

Intestino delgado numerosos corpúsculos calcáreos. A los catorce días hombre, el que adquiere este parásito al consumir
Adultos los procercoides se encuentran completamente de­
sarrollados alcanzando alrededor de 500 µm de largo.
peces ahumados, crudos ("cebíche") o sometidos a
cocción insuficiente. Los plerocercoides, al llegar al
El coracidio tiene baja especificidad con respec­ intestino, se fijan con su escólex e inician su creci­
to a este primer huésped interrnedíario y se descri­ miento y diferenciación hasta desarrollar el estado
ben alrededor de cuarenta especies de copépodos de adulto.
(h) agua dulce susceptibles a la infección en el hemis­ Experimentalmente, se ha observado en el lmm­
(b) ferio norte. En Chile, aún se desconocen las espe­ bre que este cestodo crece alrededor de 5 cm en
cies de copépodos en que se desarrolla D. /atum. promedio diariamente. El gusano adulto inicia la
El procercoide prosigue su desarrollo cuando eliminación de huevos entre los veinte y treinta días
los copépodos infectados son digeridos por peces y puede vivir durante diez o quince años, y aun
huevos Heces que se alimentan de plancton. De esta manera in­ hasta treinta en el hombre.
inmaduros gresan por la pared estomacal o intestinal a la ca­ En Chile se ha denunciado infección natural y
INGESTION HOMBRE vidad corporal, donde desarrollarán un nuevo esta­ experimental por D. /at11m en perros y gatos domés­
dio, el plerocercoide. El desarrollo y crecimiento de ticos. Los estudios en mamíferos silvestres son es­
'.11
i DE PECES los plerocercoides dependerá, entre otros factores, casos y sólo existe un posible registro en zorros
¡¡ AMBIENTE ACUATICO de la temperatura ambiental, y podrán mantenerse (Dusicyon sp.).
il (e) viables por varios años. Se les puede observar en

li
Dip/ry//obot/rrillm de11dritic11111. El gusano adul­
11
diversos órganos (hígado, gónadas, bazo), en la
cavidad corporal o músculos. En Chile, los plero­ to se desarrolla principalmente en el intestino del­
Plerocercoide cercoides de D. /atum se han descrito en Oncorhyn­ gado de diversas aves piscívoras (gaviotas, pelíca­
chus mykiss ("trucha arco iris") y Salmo trulla ("tru­ nos) y secundariamente en mamíferos (hombre,
cha mam;m") en diversos lagos y ríos del sur del zorros, osos) del hemisferio norte. En el hemisferio
país. Ambas especies de salmónidos fueron intro­ sur se ha denunciado su presencia en Chile y Ar­
(f,g) peces copépodo (d) ducidas en Chile a partir de 1905, desde Alemania. gentina. En Chile, se la identifica en gaviotas, Larus
Por otra parte, a partir de 1989 se comprueba por dominicanus y Larus mac11/ipen11is, y en infeccio­
primera vez fa presencia de plerocercoides de D. nes experimentales realizadas en perros y gatos
� latum en peces autóctonos, tales como la perca domésticos.
(e) (Percichthys trucha) y los puyes (Galaxias ma­ En Larus dominicanus y perros domésticos, los
cu/atus) los cuales presentan infecciones leves en adultos miden 60-11O cm de longitud, en infeccio­
Figura 22-1. Ciclo evolutivo de Diphyl/obothri11111 lat11111 en Chile: a) hospedadores definitivos: hombre, comparación a los salmónidos introducidos. nes experimentales de treinta y cinco a setenta y
De esta manera, la infección de los salmónidos cinco días. El escólex provisto de dos botrios, se
perro y gato alojan al estadio adulto en el intestino delgado. b) huevos en ambiente de agua dulce. c) coracidio podría suceder a través del consumo de copépodos continúa con un cuello -más corto que en D. latum­
desarrollo a partir del huevo. d) coracidio libre en el agua. e) procercoide desarrolla en el copépodo. f) puyes infectados con procercoides o de peces autóctonos, que da origen a un estróbilo que posee alrededor de
al consumir copépodos se infectarían con los procercoides y desarrollan plerocercoides. g) salmónidos especialmente Galaxias maculatus, infectados con 800 proglótidas. En el hombre, se han descrito gu­
introducidos y percas se infectarían al consumir puyes infectados con plerocercoides o copépodos con plerocercoides los cuales al llegar al estómago de sanos de hasta 2 metros de largo por 2 cm de ancho
procercoides. h) el hombre se infecta al consumir peces crudos ("cebiche") ahumados o sometidos á cocción los salmónidos lo penetran para localizarse final­ en infecciones experimentales. En general, como en
insuficiente; los perros y gatos se infectan principalmente al consumir las vísceras infectadas de los peces. mente en vísceras o músculos. En este último caso otras especies de Diphy/lobothrium, la longitud de
los salmónidos actuarían como hospedadores para­ estos parásitos depende, entre otras, de su
ténicos. Cuando la infección sucede por el consumo hospedador, del tamaño de la población parasitaria
µm de diámetro se desplaza en el agua con ayuda de luyen parte del plancton del ecosistema acuático. de copépodos infectados con procercoides, y en el y de la antigüedad de la infección. Las proglótidas
sus cilios. La supervivencia de este estadio en el En el tubo digestivo de este huésped, se produce la salmónido evolucionan a plerocercoides, actuarían son más anchas que largas, pero la razón longitud/
medio acuático dependerá de sus reservas energéti- eclosión de las oncósferas -la envoltura ciliada es al como hospedadores intennediarios. Al parecer, los anchura se incrementa en la región posterior.
cas (principalmente glicógeno), temperatura, pH y parecer digerida por las enzimas de los copépodos- salmónidos juveniles se infectarían más frecuente­ El ciclo vital, en general es similar al descrito
salinidad. En esta etapa, el coracidio no consume que ingresan por acción mecánica de los tres pares mente a través de copépodos y los adultos, de mayor para D. /atum. Los huevos del parásito son expul­
oxígeno y su metabolismo es anaeróbico. de ganchos, y posiblemente por acción enzimática, talla, principalmente por el consumo de otros peces; sados con los excrementos del huésped definitivo,
La emergencia de los coracidios requiere de 9- al hemocele donde prosiguen su desarrollo origi- según las evidencias existentes sobre dieta de los los que se desarrollan en el agua (lagos, ríos). Los
º
25 C. Al incrementarse la temperatura,' el período nando un nuevo estado larvario denominado salmónidos introducidos. huevos tienen dimensiones variables, al igual que
de formación y porcentaje de emergencia de los procercoide, el que se desarrolla hacia el sexto u En el hemisferio norte los principales huéspedes en otras especies de Diphyl/obothri11m. En infeccio­
coracidios decrece; por el contrario, al disminuir la octavo día (a 18-20 ºC). Mide 200 µm, presenta en para D. latum pertenecen a los géneros Esox, Perca nes experimentales y naturales de gaviotas, perros
temperatura, tal periodo y porcentaje se incrementan. su extremo posterior una estructura donde se alojan y Lota. Los plerocercoides de D. latum, de color y gatos los huevos miden 51-69 x 34,0-52,0 µm.
El coracidio sobrevive 36-48 h a 18-24 ºC y hasta
96 h a 5ºC.
tres pares de ganchos (cercómero), en la región
anterior desembocan los conductos de algunas glán- ! blanquecino miden alrededor de 5-30 mm de longi­
tud, presentan un escólex retraído provisto de dos
El huevo, provisto de opérculo, desarrolla un
coracidio y los factores físico-químicos que influ­
/
El coracidio prosigue su desarrollo cuando es-.... dulas, cuyas secreciones presumiblemente ayuda- ¡·

J
botrios y un tegumento cubierto de micrótricos que yen.-,en su desarrollo y supervivencia son, en gene­
consumido por los copépodos adecuados (micro- rían a esta' larva en·su desplazamiento por los teji- miden menos de 3 µm de longitud. ral, similares a los de D. /atum. El coracidio tam­
crustáceos), Cyclopoida y/o Calanoida, que consti- dos del siguiente huésped. El parénquima presenta El principal huésped definitivo de D. /atum es el bién requiere de luz como estímulo para emerger.
204 PARAS/TOLOGIA MEDICA PARASITOLOG!A Cl!NICA 205

1
El ciclo prosigue cuando el coracidio es ingerido miden 50-60 µm de largo x 36-40 µm de ancho y al
por algunas especies de copépodos (Calanoida y/o . ser expulsados con los excrementos, en el medio
Cyclopoida) en cuyo hemocele se transforma a acuático marino desarrollan un estadio de coraci­
procercoide; en Chile aún se desconocen las espe­
cies de estos huéspedes para D. dendriticum.
dio. Según investigaciones experimentales, realiza­
das en Perú, el coracidio se desarrolla en tres días ¡i\
El estadio de plerocercoide se desarrolla en dis­ a 22 ºC y al cuarto día es capaz de emerger, al i\
tintos peces de agua dulce (salmónidos, osméridos, desprender el opérculo. Presentan 40 µm de diáme­
gasterosteidos) de Europa y Norteamérica. En Chi­ tro y la oncósfera presenta sus típicos tres pares de
le se describén O. myldss, Oncorhynchus kisutch ganchos. La influencia de otros factores físico-quí­
("salmón coho'') y S. tr11tta, y se localizan en las micos (luz, pH, salinidad, etc. ) en el desarrollo y
vísceras, cavidad corporal y musculatura. Los ple­ supervivencia del coracidio, no han sido investiga­
rocercoides presentan un escólex poco retraído y dos. Tampoco se han descrito hasta la fecha los
micróticos generalmente más largos que los de D. primeros huéspedes intermediarios, que posiblemen­
!atum (7-12 µm). Al igual que en D. !atum, en te son copépodos del plancton marino, en cuyo
algunos lagos del sur de Chile también se registra hemocele se desarrollaría el estadio de procercoide.
la infección en peces autóctonos tales como percas Con respecto al segundo huésped intermediario,
y puyes, estos últimos es posible que por su tamaño se han mencionado algunas especies de peces ma­ "
menor que los salmónidos introducidos, trasmitan rinos en la costa de Perú (Sciaena deliciosa, Trachi- i
con mayor frecuencia la infección a las gaviotas. 110/us paitensis, Galeichthys jordani, Serio/ella !I
Las gaviotas, que son los hospedadores definiti­ violacea y Pai-a/ichthys adspersus); se plantea que lii
vos más importantes, se infectan al consumir peces estos peces carnívoros actuarían como huéspedes \',
moribundos o muertos, o a través de las vísceras paraténicos y otros peces planctófagos serían los iI''
infectadas que eliminan los pescadores deportivos. verdaderos huéspedes intermediarios.
En Chile no se han descrito casos de infección Los plerocercoides presentan un escólex retraí­ L¡
humana por D. dendritic11111, pero sí en el hemisfe­ do con dos botrios, miden entre 5-10 mm de longi­ \!),1
rio no.rte. Tales infecciones suelen mantenerse sólo tud y se encuentran enquistados en el peritoneo y
por algunos meses, en contraposición a D. /a/11111 pared estomacal. En el futuro se requieren investi­
que puede vivir por varios años. gaciones sobre la localización muscular de los plero­
Experimentalmente, según distintas investiga­ cercoides, por ser ésta de mayor importancia como
ciones realizadas en el hemisferio norte y en Chile, fuente de infección humana, y complementar su
se ha comprobado en gaviotas y mamíferos (h�mster descripción morfológica.
y perros), que la eliminación de huevos se inicia La infección humana sucede cuando el hombre
entre los siete y diecisiete días de contraída la infec­ consume peces crudos (cebiche o similares), ahu­
ción. mados o sometidos a cocción o congelamiento insu­
ficiente. En infecciones experimentales realizadas
Diphyllobothri11111 pacijic11111. El cestodo adulto en perros domésticos, se ha observado que los adul­
se desarrolla en el intestino delgado de mamíferos tos inician la eliminación de huevos hacia los cua­
marinos pertenecientes a la Familia Otariidae (en­ renta y cinco y cincuenta y cinco días después de
tre ellos "lobos comunes" y "lobos finos") en el ingerir los plerocercoides. Los mamíferos marinos
hemisferio norte y sur. En Chile se le ha denuncia­ se infectan al consumir peces y, generalmente, pre­
do en Otaria jlavescens y Arctocephalus plzilippii. sentan infecciones intensas.
La infección humana por este cestodo se registra en
América del Sur, en poblaciones del Perú y Chile, Epidemiología
y en el hemisferio norte, en Japón.
El estadio adulto, en el hombre, presenta un La infección humana por Diphyllobothri11111 spp.
escólex ovalado o en fonna de hoja provisto con dos se encuentra directamente relacionada con el hábito
botrios y mide 1,3-2,5 mm de longitud por 0,6-1,5 de consumir peces crudos, sometidos a cocción in­
mm de ancho máximo. El cuello es corto y la estró­ suficiente a ahumados.
bila puede medir 0,5-2,0 metros de largo. Las pro­ La infección por D. /atum se distribuye en las
glótidas son más anchas que largas (entre 5-1O mm regiones templadas y subárticas de Eurasia. La in­
de ancho por 1,2-2,0 mm de largo) con útero central fección humana se registra, principalmente, en el Figura 22-2. (A) Biotopo de salmónidos huéspedes de plerocercoides de D. la/11111 y D. dendritic11m. (B)
provisto de espiras generalmente paralelas, pero norte de la Unión Soviética, cuenca del río Volga y Adulto de D. /atum aislado en un caso humano. (C) Escólex, cuello y estróbilo inmaduro de D. latum. (D)
que también muestra una forma de roseta. Finlandia, norte de Italia, Suiza y en áreas del río Corte transversal de un escólex deDyplzyllobothri11111 sp. (E) a (F) ProglótidasdeD. /a/11111. (G} Cirro y vesícula
Sob(e el ciclo vital de este"parásit<i'exi_s'ten esca­ o·áhli_bfü! Este cestodo, al parecer, fue introducido seminal en un corte sagital·de proglótida�de·D:/a/11m. (H) Escólex, cuello y estróbilo inmaduro de D.
sos antecedentes, y se supone que es similar al de por inmigrantes en el continente americano y la dendrilic11111. (1) y (J) Próglótidas de D. dendriticiti11. e= escólex; es= estróbilo; c= cuello; b= botrios; u= útero;
otras especies de Diphyllobotlzri11111. Los huevos infección existe en América del Norte, Estados t= testículos y folículos vitelógenos; a= atrio genital; ci= cirro; vs= vesícula seminal.
20/í PARASITOLOG/A MEDICA PARASITOLOG/A CLINICA 207

Unidos y Canadá, así como en América del Sur, en


Argentina y Chile.
En algunos países como Finlandia, entre 1960-
Diphyllobothrium dendriticum se ha identifica­
do en gaviotas de los lagos Llanquihue, Rupanco,
Puyehue, Calafquén, Riñihue, Caburga y en el río
r
,, • 1

1978, la prevalencia de infección humana por D. Valdivia.


latwn disminuyó de un 18 a un 4,5% para alcanzar En general, no existe relación directa entre pre­
en la actualidad un 1-2%. Sin embargo, en Japón se valencia e intensidad de infección en salmónidos e
observa una tendencia al aumento de esta infección infección humana, lo que puede atribuirse en parte
y se diagnostican alrededor de. cien casos anuales, a que la mayoría de la población habitualmente
causados por varias especies de Diphy/lobothrium, consume los salmónidos bien cocidos, resultando i 0.��,I),____ �
entre ellas D. nihonkaiense y D. pacificum transmi­
tidas por peces marinos y anádromos. En Canadá se
en una baja prevalencia e intensidad de infección
humana, pero que debido a la eliminación de gran ·········---··· •.'.A
denuncian anualmente alrededor de veinticinco ca­ cantidad de huevos por cada paciente infectado (20-
sos de difilobotriosis. 40 millones diariamente) se posibilitan posterior­
En la costa oeste de los Estados Unidos (Cali­ mente elevadas prevalencias e intensidades de in­
fornia, Oregón, Washington, Alaska y Hawaii), tam­ fección en los salmónidos. Por otra parte, la infec­
bién se observó un incremento de la infección entre ción muscular por plerocercoides de Diphyllobo­
1979 y 1980. En Chile, el primer caso de infección thrium spp. varía en los distintos lagos, así como el
humana fue denunciado en I 950 por el profesor predominio de cada especie (D. lalllm y D. dendri­
Amador Neghme y colaboradores. Hasta 1993 se ticum). Además, los mamiferos, incluyendo al hom­
habían· publicado alrededor de ochenta casos de in­ bre, son poco susceptibles a la infección por D.
fección por D. /atum, lo que no representa de ningún dendriticum, y en Chile no se ha demostrado infec­
modo la magnitud real de la infección, por cuanto ción natural en mamíferos.
muchos de tales casos permanecen en los archivos Con respecto a D. pacificum se han publicado
de los laboratorios sin ser dados a conocer. alrededor de catorce casos de infección humana en
Diversos estudios epidemiológicos sobre ente­ Chile, especialmente en el sector comprendido en­
roparasitosis indican que los focos principales de tre el centro y norte del país. También se ha descrito
difilobotriosis en ecosistemas de agua dulce se ha­ infección en perros domésticos. La infección en
llan localizados en las cuencas de los ríos Toltén y mamíferos marinos de las costas chilenas puede
Valdivia en el sur de Chile. Investigaciones epide­ presentar altas prevalencias e intensidad media. La
miológicas realizadas en 1951 en zonas ribereñas infección humana ocurre al consumir peces mari­
de estas cuencas, demostraron prevalencias de 0,2 a nos preparados como "cebiche", "sushi", "sushimi".
3,4% en los lagos Colico, Villarrica, Panguipulli y Sólo en la cpsta peruana se han comprobado expe­
Riñihue, siendo mayor la de este último sector. Aun­ rimentalmente algunos peces como hospedadores
que, en este último lago se ha logrado disminuir la intermediarios para D. pacificum.
prevalencia de infección humana en los últimos Numerosos casos de difilobotriosis humana por
años a través de acciones educativas y tratamiento D. pacificum se registran en la población humana
de pacientes infectados. de la costa peruana. En la población general de
La infección por plerocercoides de Diphyllo­ algunos sectores se señala entre un 0,02 y 0,09% de
bothrium spp. suele presentar prevalencias e inten­ prevalencia en las localidades de Arequipa y en la
sidades altas en aquellos peces de mayor tamaño y costa del sur del Perú.
que proceden de los lagos; en los ríos, la infección
suele ser menor. Patología
En distintos lagos del sur de Chile (Colico,
Caburga, Villarrica, Calafquén, Panguipulli, La acción patógena de Diphy/lobothri11111 spp.
Riñihue, Ranco, Maihue y Puyehue) se presentan deriva de la acción tóxica y alérgica que ejerce sobre
prevalencias de infección por D. /atum que fluctúan el huésped. Por su gran tamaño, puede que provo­
entre un 4 y 78% en O. mykiss. que un aumento de la producción de mucus e infla­
La contaminación fecal a través de sistemas de mación superficial de la mucosa intestinal. La ex­
alcantarillado que conectan con los lagos, o me­ poliación de nutrientes (azúcares, aminoácidos, vi­
diante la eliminación de excrementos humanos en taminas, etc.), agregado a la secreción de cataboli­
cursos de aguas (esteros, ríos), contribuye a la dise­ tos y productos de la degeneración de proglótidas en Figura 22-3. (A) y (B) Huevo de Dyphyllobothri11111 sp. (C) Coracidio de D. latum envuelto por la cósc�ra del huevo.
minación de los huevos de D. latum. el intestino, determinan los síntomas vagos de esta (D) Opérculo. (E) y (F) Coracidio libre. (G) Copépodo. (H) Ejemplar de Salmo gaird11eri. (1) y (J) Salmónidos infectados
Por otra parte, las gaviotas, L, dominica1111s y L. parasitosis... con plerocercoides. (K) Plerocercoides. (L) y (M) Escólices de plerocercoides de Dyphyllobothri11111 spp. (N) y (O)
maculipennis, diseminan los huevos de D. dendri­ -. Dip/rylliiii'othri111ii latwii' destácá por su capaci­ Micrótricos de plerocercoides de D. dendriticum. (Figs. N=Microscopia óptiéii; O= Microscopia de barrido). La lig. (O)
ticum en los ecosistemas de agua dulce, lo que con­ dad de sustraer vitamina B 12 del lumen intestinal fue registrada por el Sr. L. Delannoy (Unidad de Microscopia Electrónica, UACH). o= opérculo; c= cápsula; co=
tribuye a la infección mixta de los salmónidos. del hospedero y puede producir una severa anemia coracidio; e= envoltura ciliada; g= ganchos; b = barios; m= micrótricos.

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208' PARASITOLOG/A MEDICA PARASITOLOGIA CL/NICA 209


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megaloblástica, la cual, al no ser tratada oportuna­ nes, la primera manifestación de la parasitosis suele dad muscular y provoca parálisis espástica del hel­
mente, llega a comprometer el sistema nervioso ser la eliminación de un trozo de estróbila. minto y, a mayor concentración de la droga, produ­
central y periférico. La anemia en esta infección La sintomatología causada por D. lat11m es simi­ ce vacuolización y vesiculización del tegumento del '
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está determinada por factores propios del parásito y lar a la provocada por las otras "lombrices solita­ parásito e incrementa la permeabilidad del catión ¡:
del huésped.
Por parte del parásito, son importantes su núme­
rias" (Taenia soli11111 y T. saginata). Corno síntomas
generales se describe la baja de peso, astenia, adi­
calcio, permitiendo la acción de los fermentos
proteolíticos del huésped. i¡1l
ro, su vitalidad y longevidad, su capacidad namia, anorexia o bulimia y ansias por comer sal; La niclosamida es la droga de alternativa y se ¡!
expoliatriz de vitamina B., y la altura del intestino síntomas digestivos con epigastralgia, náuseas ma­ usa en dosis igual que en el tratamiento de las
en que se encuentre anclado el escólex. tinales y vómitos, meteorismo y diarrea alternada teniasis. Cura parasitológicamente el 80-95% de
La vitamina B 12 es esencial para la síntesis del con estitiquez. Al igual que en las teniasis, los sín­ los casos y actúa por inhibición de la fosforilación
adenosindifosfato que actúa a nivel de la médula tomas nerviosos pueden manifestarse por preocu­ anaeróbica del adenosin difosfato (ADP) en las
ósea en la maduración de las células precursoras de pación y, a veces, sensación de vergüenza por sa­ mitocondrias del parásito. En los gusanos elimina­
las tres series hemáticas, y su carencia puede dar berse parasitados, así como adormecimiento de las dos, se observaron alteraciones del escólex y las
Figura22-4. Plerocercoides aislados en trucha arco proglótidas, lo que permite el ataque de las enzimas
origen a anemia, leucopenia y trombocitopenia. Esta extremidades. Los síntomas alérgicos a nivel de
vitamina se absorbe en el intestino cuando está unida iris: A) Diphillobothri11m dendritic11111. B) Diphillo­ proteolíticas del intestino.
piel y mucosas son escasos.
con el factor intrínseco, proteína transportadora se­ Si se presenta la anemia megaloblástica, se agre­ bothri11111 latum. Para evitar la digestión del gusano en el intes­
cretada por el jugo gástrico. Diphy/lobothrium la­ ga la sintomatología propia de ese estado: palidez, tino, se recomienda, una o dos horas después de
twn es capaz de separar este complejo vitamina B12- subictericia, glositis, depapilación lingual y, a ve­ administrado cualquiera de estos medicamentos,
factor intrínseco, y en estas condiciones, la vitami­ ces, fiebre, hepatomegalia y edema pretibial. Si hay utilizar un purgante o catártico para eliminar el
na no es absorbida por el huésped pero sí por el complicaciones neurológicas, se observarán altera­ gante, debiera examinársele sus heces con el fin de parásito, el cual debe ser examinado para verificar
gusano que llega a captarla diez a quince veces más ciones de la motilidad, incoordinación motora y verificar si hubo curación parasitológica, lo cual se si se eliminó el escólex con el cuello, lo que indica­
que otros cestodos. Por otra parte, la ubicación del deterioro de la sensibilidad, con diverso compromi­ confirma por la eliminación del escólex. Si esto no ria la cura parasitológica.
parásito en el intestino es otro factor importante en so psíquico y cerebral. ocurre, rápidamente el gusano se desarrolla en el En caso de presentarse anemia, y con mayor
la génesis de la anemia: cuando la lombriz se loca­ intestino, y puesto que la velocidad de crecimiento razón si hay compromiso neurológico, se debe suple­
liza en la parte alta del intestino, la porción proxi­ Diagnóstico es impresionante, la eliminación de huevos comien­ mentar la dieta con vitamina B 12 alrededor de 100
mal, que es la parte metabólica más activa del gu­ za otra vez, al cabo de tres a cuatro semanas. microgramos diarios por vía oral, cutánea o intra­
sano, capta la vitamina B 12 antes que alcance el Diagnóstico en el hombre. El antecedente so­ En caso de anemia rnegaloblástica, descartadas muscular, asociada con hierro y ácido fálico 1 a 5
íleon, sitio de su absorción. Además, este cestodo bre el tipo y hábito de consumo de carne de pescado las posibilidades de la anemia clásica de Biermer y mg diarios, hasta la recuperación hernatológica, la
absorbe folatos y otros elementos que determinará marino o dulceacuícola, puede ayudar como orien­ en ausencia de aquilia gástrica, debe interrogarse que ocurre a los diez o veinte días. La recuperación
diversos matices de la anemia debida a estas defi­ tación diagnóstica para la especie de Diphy­ sobre el consumo de carne de pescado de río o lago, neurológica es más lenta y, en estos casos, la terapia
ciencias polivitamínicas. /lobothri11m involucrado. Como Diphy/lobothriwn para investigar la infección por D. latum como cau­ debe mantenerse por un tiempo más prolongado.
Por parte del hospedero es primordial el aporte spp. produce. una elevada postura de huevos, el sim­ sa etiológica de la anemia.
de vitamina B 12, y además se presenta más frecuen­ ple examen de heces basta para hacer el diagnósti­ Prevención
temente en individuos de ascendencia nórdica. Se co. Sin embargo, pudiera existir alrededor de un 5% Diagnóstico en el pez. Los plerocercoides, ele­
ha logra.do establecer que la anemia es más intensa de falsos negativos; en estos casos, es recomendable mentos infectantes para los huéspedes definitivos La educación sanitaria de la población es un
en pacientes que padecen de gastritis crónica, defi­ efectuar el examen coproparasitario seriado. de la difilobotriosis, presentan un aspecto de gusa­ factor importante en la prevención de la difilo­
ciencia en la producción de factor intrínseco, aquilia Los huevos de D. lat11m miden 50-75 µm de nos blanquecinos, de 2 a 4 cm de largo en la mus­ botriosis. En lo que respecta a D. latw11 y D. den­
o aclorhidria gástrica. largo por 40-50 µm de ancho, de color pardo ama­ culatura, vísceras y cavidad peritoneal de los peces driticum se propone la cocción o congelamiento de
Si el cuadro hematológico se prolonga en el rillento, ovoideos y operculados. Como los huevos observándose libres o encapsulados en los tejidos. la carne de peces para matar los plerocercoides (más
tiempo, se establece un severo compromiso del sis­ de D. pac!ficum presentan iguales características y Su identificación es dificil y debe ser realizada por de 56 ºC por 5 minutos, -18 ºC por 24 h ó -10 ºC
tema nervioso central y periférico por un fenómeno miden 50-60 µm de largo por 36-40 µm de ancho, un especialista mediante un adecuado estudio en por 72 h). La salazón adecuada de los filetes de
de desmielinización que genera lesiones degene­ se recomienda hacer el diagnóstico de huevos de preparaciones teñidas, cortes histológicos y pescado también sería efectiva.
rativas de la médula espinal, neuritis periférica, Diphyllobothri11m sp. ante la dificultad de diferen­ microscopia de barrido. La disposición racional de los sistemas de al­
atrofia del nervio óptico, etcétera. ciar la especie. cantarillados, adecuados a las zonas endémicas, así
Expulsado el gusano, mejoran rápidamente los Si el paciente elimina proglótidas grávidas ais­ Tratamiento como la existencia de plantas de purificación (quí­
signos hematológicos de la anemia y se normalizan ladas o un trozo de estróbilo, el diagnóstico se basa mica o biológica) de aguas contaminadas, puede
los valores del hemcigrama. En cambio, la sintoma­ en su aspecto típico: proglótidas más anchas que Corno cestocidas se utilizan los mismos medica­ disminuir, a su vez, la contaminación de ríos y
tología neurológica es más lenta en regresar, Jo que largas, útero en forma de roseta repleto de huevos mentos indicados para las otras lombrices solitarias lagos con los huevos de estos parásitos y la ulterior
depende de la intensidad y cronicidad de la anemia. y un poro genital central y ventral. En la mayor (Taenia solium y T. saginata), principalmente el infección de los sucesivos huéspedes intermedia­
Por este motivo, en estos casos es necesario aportar parte de los casos, también el diagnóstico debe ser prazicuantel y la niclosamida (véase Capítulo 66: rios.
vitamina B 12 por un tiempo prolongado. de proglótidas de Diphyllobothriwn sp. por la difi­ Tratamiento de las Parasitosis y Tablas Terapéuti­ El tratamiento oportuno y control de las perso­
cultad de diferenciar la especie; salvo si se efectúan cas). nas infectadas debe ser inmediato, ya que se ha
Sintomatología estud_ios sobre la estructura y disposición del siste­ El medicamento de elección es el prazicuantel. calculado que éstas eliminan un promedio de
ma reproductor en proglótidas teñidas y en sus cor­ Administrado en dosis única de 25 mg/kg/peso, 122.000 huevos por gramo de excrementos. Un
Un grupo importante de pacientes, estimado en tes histológicos sagitales. produce la eliminación de él o los gusanos en el 98- escaso número de personas infectadas en zonas
alrededor del 50%, son asintomáticos. En ocasio- Al paciente tratado con medicamentos y pur- 100% de los casos. Este fármaco aumenta la activi- endémicas puede contribuir a infecciones severas
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¡).,
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211
210 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOLOGIA CL/NICA
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il
peces deben ser enterrados o quemados. Esto último
también debe considerarse para evitar la infección Escalante H, Jara. C, Chico-Ruiz J. Nuevos hallazgos de Torres P, Torres J, Garrido O, Thibaut J. Investigaciones Torres P, Cubillos V, Aedo E, Silva R, Garrido O, Aedo

¡Í
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1
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¡i i.j
1

en salmones coho que retoman del océano a los bothriasis nihonkaiense (diphyllobothriasis /atum).

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)i �¡
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Capítulo 23 1
1 H/MENOLEPIOSJS Y D/P/LIDJOS/S 213

Intestino delgado
HIMENOLEPIOSIS Y DIPILIDIOSIS .· .. ·.,,·,,_,.:·.¡·,_._ ;,
:A4t1lt()S
MARIA lNESBAHAMONDE

HIMENOLEPIOSIS con tres masas testiculares localizados horizontal­

- - - - - - .,.,.
mente a lo ancho de la proglótida y con los poros I Heces
Definición. Es la infección parasitaria del intes­ genitales dispuestos todos hacia el mismo lado. 1
tino delgado del hombre, producida por cestodos del Los huevos son esféricos o ligeramente elípticos, ....
género Hymenolepis, los cuales pueden producir HOMBRE

,.
de aspecto hialino, miden de 30 a 50 µm de diáme­
manifestaciones clínicas, principalmente en los ni­ tro, contienen una oncósfera o embrión hexacanto
ños. El género Hymenolepis posee dos especies que 'ARTROPODOS AMBIENTE
con tres pares de ganchos dispuestos en forma para­ 1
parasitan al hombre, Hymenolepis nana o "tenia lela, envuelto por una gruesa corteza con dos mame­ (e)
enana", la más frecuente en el hombre, y otra excep­ lones polares de los cuales emergen de 4 a 8 filamen­
cional, Hymenolepis diminuta o "tenia del ratón". tos (Figura 22-1 y Lámina 19).
El parasitismo por este cestodo es múltiple. Los
Hy111e11olepis 11a11a parásitos adultos se localizan en el intestino delgado
de los hospederos definitivos que son los hombres,
Hymenolepis nana es el cestodo más pequeño ratas y ratones. Algunos autores diferencian Hyme­
que parasita el intestino humano, mide de 2 a 4 cm nolepis nana de los roedores como variedad fraterna,
de largo por 1 mm de ancho (véase Figuras 1-6 y morfológicamente igual a la variedad nana propia del
23-1)..El escólex de 0,3 mm de diámetro es rom­ hombre y con la cual puede presentar infecciones
boidal, posee cuatro ventosas y un pequeño rostelo cruzadas.
retráctil capaz de invaginarse, con 20 a 30 ganchos El hol)lbre se infecta al ingerir los huevos que
dispuestos en un anillo. El cuello es una elongada son infectantes inmediatamente al ser eliminados en
porción que da origen a cortas, delgadas e inmaduras las heces de individuos parasitados (Figura 23-2). Figura 23-2. Ciclo evolutivo deHymeno/epis 11011a. El hombre se infecta al ingerir los huevos del parásito (a). La oncosfera
proglótidas que van aumentando de tamaño a medi­ En el duodeno los huevos se rompen liberando la liberada en el intestino delgado, penetra a la vellosidad intestinal formando el cisticercoide que al cabo de algunos días
da que se alejan de la región generatriz. Las progló­ oncósfera que penetra a la vellosidad intestinal y rompe la vellosidad que lo contiene y se desarrolla el cestodo adulto, el cual elimina proglótidas grávidas y/o huevos que
tidas, de cien a doscientas, son trapezoidales y pue­ después de dos o tres días, se desarrolla el estado salen al exterior con las heces. Puede haber una autoinfección endógena mediante huevos que eclosionan dentro deJ·
den alcanzar tamaños de O, I a 0,3 mm de alto por 0,8 larval o cisticercoide, estructura de forma alargada, intestino (b) produciendo cisticercoides. En raras ocasiones, participan en este ciclo algunos artrópodos (pulgas, gorgojos)
a I mm de ancho, contienen un ovario bilobulado (c) que desarrollan cisticercoides luego de inge_rir los huevos en el medio externo; en estos casos, el hombre se infecta
con el extremo anterior engrosado que contiene un
al ingerir accidentalmente estos insectos infectados.

escólex invaginado. Después de varios días, el cisti­ podos, pulgas y gorgojos, los cuales en sus estadios
cercoide completa su crecimiento, rompe la vello­ larvales se infectan al ingerir los huevos de H. nana
sidad y se libera hacia el lumen intestinal donde se desarrollando los citicercoides en su interior. El
va a fijar a la mucosa por medio de sus ventosas e hombre, rata o ratones, se infectan por ingerir acci­
inicia la fonnación de proglótidas. La duración del dentalmente estos insectos ( ciclo heteroxénico ).
ciclo completo, desde la ingestión del huevo hasta la
formación del ejemplar adulto, es de tres semanas. Epidemiologia. Es la cestodiasis más frecuente
Este ciclo puede presentar algunas variaciones, en el hombre, infección cosmopolita principalmente
tales pomo la dutoinfección endógena, cuando los de zonas tropicales, cálidas y templadas. Es mucho
huevos sin salir al medio externo, eclosionan en el más frecuente en niños, especialmente preescolares,
interior del intestino, formando posteriomente ejem­ debido a la mayor facilidad de transmisión por los
plares adultos, y la autoinfección exógena, cuando pre.carios hábitos higiénicos que éstos presentan y
el mismo individuo se infecta por los huevos que son por algún factor inmunitario que se desarrollaría con
eliminados en sus heces. la edad. No tiene diferencias por sexo. Cestodiasis
B El ciclo descrito considera al hombre como hos­ frecuente en la región sudorienta! de los Estados
pedero definitivo e intermediario (ciclo monoxénico); Unidos, América Latina, Australia, países del Me­
sin embargo, en forma excepcional pueden partici­ diterráneo, Oriente Medio y la India.
Figura 23-1. Hymeno/epis nana. (A) Ejemplar con escólex evaginado. (B) Estróbila. (C) Huevo. par como hospederos intermediarios diversos artró- Estudios epidemiológicos realizados en diver-
214 PARASITOLOGIA MEDICA

sos países, revelan prevalencias que oscilan entre la aparición de sintomatología de una himenolepiosis
l HIMENOLEP/OSIS l' D/P/L!DIOSIS

res e insectos y en la prevención de la contamina­


215

ción de los alimentos por éstos.


0,1% en población escolar de Israel, hasta 24% en hasta entonces latente. En los adultos, la infección
zonas urbanas de Zimbabwe. En Chile, estudios
epidemiológicos reportan frecuencias de infección
suele ser asintomática debido al desarrollo de resis­
tencia gradual y progresiva a infecciones consecuti­
DIPILIDIOSIS I 'I
; 1
de 4,5% en población general, con una tasa de in­ vas. Dipy/idi11111 ca11i1111111
fección de 1.300/100.000 en menores de 15 años.
Otros estudios realizados en salas cuna y jardines Diagnóstico. Se basa en la identificación de hue­ Es un cestodo común de perros, gatos y otras
infantiles de Santiago, demuestran prevalencias del vos característicos en el examen seriado de deposi­ especies de cánidos y félidos silvestres. La infección
3,4% en lactantes y preescolares. ciones, utilizando métodos de concentración y sedi­ humana se ha descrito en diversos países de Europa,
mentación. Debido al pequeño tamaño del cestodo y Filipinas, China, Japón, América Latina y Estados
Patología. El daño producido depende de la car­ a la destrucción de las proglótidas en el lumen intes­ Unidos.
ga parasitaria y del estado inmunológico y nutritivo tinal, es raro encontrar estos elementos en las heces. El ejemplar adulto mide de I O a 70 cm de long_itud
del hospedero. A nivel intestinal, se produce una (Figura 23-4). El escólex de 200 a500 µm es romb01dal,
Figura 23-3. Huevo de Hyme110/epis dimi11uta.
enteritis causada probablemente por la absorción de Tratamiento. El tratamiento de elección es el pra­ posee cuatro ventosas acetabulares y un rostelo
desechos metabólicos del parásito (mecanismo toxia­ zicuantel en dosis única de 25 mg/kg/día vía oral, dotado de una a siete coronas de ganchos, depen­
Jérgico ), y por el desarrollo de los cisticercoides en lográndose un adecuado nivel de curación cercano diendo de la edad del parásito. Las proglótidas son
el interior de la vellosidad intestinal, destacándose Varios artrópodos coprozoicos sirven como hos­
al 100%. Carece de toxicidad y es bien tolerado. elípticas y semejan una cadena de "pepitas de me­
un infiltrado eosinofilico local, que podría relacionar­ pederos intermediarios entre los que se destacan
Rara vez determina efectos colaterales y, cuando los lón", con dos poros genitales, uno a cada lado. En
se con la eosinofilia periférica que se observa en esta lepidópteros, tijeretas, miriápodos, estados_ larva_les
hay, son leves y transitorios. las proglótidas maduras el útero se transforma en
parasitosis. Infecciones experimentales en ratones, de pulgas, escarabajos y cucarachas. En el )ntestmo
Otro medicamento recomendado es la niclo­ múltiples sacos poligonales que poseen entre 8 a 15
demuestran que existe disminución de proteínas y de estos artrópodos, los huevos se rompen liberando
samída; sin embargo, el tratamiento es prolongado y huevos contenidos por una cápsula o membrana
lípidos en la mucosa intestinal en presencia de el embrión hexacanto que penetra en el hemocele
debe asociarse un laxante; se usa en dosis de 2 g el ovígera. Los huevos, de 20 a 40 µm de diámetro, son
cisticercoides (mecanismo expoliatriz). En individuos donde se transforma en larva cisticercoide. La inges­
primer día, seguido de 500 mg/día por 5 a 7 días. esféricos, con una delgada cubierta hialina con tenue
con himenolepiosis se ha reportado aumento de la tión de los hospederos intennediarios parasitados
produce la infección en el hospedero definitivo Y, tinte rojo oscuro, en cuyo interior se encuentran �­
actividad sérica del complemento, disminución de Prevención. Está orientada a evitar el fecalismo nos ganchos de 12 a 15 µm de longitud. Las proglo­
los niveles de IgA y aumento de IgE. Además, en accidentalmente, en el hombre.
ambiental que incluye una adecuada disposición de tidas grávidas se desprenden una a u!lª. º en grup�s
ratones se ha observado aumento del número y acti­ Todos los grupos etarios son susceptibles. En el
excretas humanas; educación para la salud dirigida a de la estróbila y frecuentemente se ehmman a traves
vidad de mastocitos en la mucosa intestinal, todo lo hombre la infección es bien tolerada, sin un cuadro
la comunidad, manipuladores de alimentos y perso­ del ano. La desintegración de las proglótidas dentro
cual orienta a la existencia de un respuesta inmuno­ clínico propio. Se presenta diarrea, dolor abdominal
nal de jardines infantiles; protección de alimentos, del intestino es inusual pero, a veces, se encuentran
lógica protectora, desencadenada por la presencia difuso y otras manifestaciones inespecíficas.
agua y utensilios de la contaminación con vectores
de cisticercoides y ejemplares adultos de H. nar¡a Diagnóstico. Se basa en el hallazgo d� los h�e­ cápsulas ovígeras en las deposiciones.
mecánicos. A nivel individual, aseo frecuente de _ Los huevos encapsulados o las proglótidas com­
(hipersensibilidad retardada). vos característicos en el examen paras1tolog1co
manos, evitar la onicofagia y tratamiento de los in­ pletas son ingeridas por los estados larvales de pul-.·
seriado de deposiciones.
dividuos infectados para eliminar las fuentes de in­ gas de gatos, perros y humanos, en los cuales, como
Sintomatología. La intensidad de las manifesta­ Tratamiento. El tratamiento de elección es el
fección. hospederos intermediarios se desarrollan el pro­
ciones clínicas está determinada por el número de prazicuantel en dosis única de _25_ mg(�g/día.
Prevención. Se basa en la ehmmac10n de roedo- cercoide y la larva cisticercoide en el hemocele de
parásitos existentes, edad y estado general del indi­ Hy111e110/epis di111i1111ta
viduo infectado. Varía desde infecciones asintomá­
ticas hasta cuadros severos con parasitosis masivas El ejemplar adulto parasita el intestino delgado
y recurrentes (más de 15.000 huevos/g heces). Las de ratas y ratones. Su tamaño es de 20 a 60 cm de
manifestaciones clínicas son más frecuentes en ni­ longitud y el ancho aumenta en forma gradual desde
ños, preescolares y escolares. Las infecciones leves 0,5 a la región cervical, hasta 4 mm en el extremo
son asintomáticas o presentan molestias abdomina­ distal. Posee un escólex con cuatro ventosas y un
les vagas. Los casos moderados producen dolor ab­ pequeño rostelo retráctil desprovisto de ganchos.
dominal tipo cólico en epigastrio y zona periumbili­ Las proglótidas son cortas y anchas, poseen órga­
cal, meteorismo, náuseas, vómitos y diarrea profusa, nos genitales de ambos sexos que desembocan en
palidez, anorexia y pérdida de peso, además de ma­ un poro genital lateral. Las proglótidas grávidas se
nifestaciones como irritabilidad, insomnio y enuresis. desprenden en el interior del intestino donde liberan
En las infecciones severas se exacerban los sínto­ los huevos que salen al exterior por las heces. Estos
mas, la diarrea es más frecuente y produce un rápido son redondeados y miden entre 60 a 80 µm de diá­
deterioro del desarrollo ponderal, incluso asociado a metro, tfonen aspecto amarillento, con una gruesa
síndrome de malabsorción. membrana externa transparente y una delgada mem­
En la mayoría de las infecciones moderadas y brana interna que envuelve al embrión hexacanto B
severas, se presenta eosinofilia que oscila entre 5 a que presenta los ganchos dispuestos en forma de
15 %, con recuentos absolutos de eosinófilos supe­ abanico (Figura 23-3). Entre las dos membranas · · · con sus dos
riores a 500/mm3• Figura 23-4. Dipylidium canin11111. (A) EJemplares ehmmad os en un caso humano. (B) proglótida grávida
existe una matriz gelatinosa incolora que, a diferen­ poros genitales.
El uso de corticoides y citostáticos puede gatillar cia de H. nana, carece de filamentos polares. i
C.
· 1·
21.6 PARASITOLOGJA MEDICA ·_::_·.·:_·· Capítulo 24
¡
estos insectos. Cuando estos insectos son ingeridos-• worms. Clinical Parasitology. 9'" ed. Philadelphia, [f,. OTROS PARASITOS Y COMENSALES
por hospederos mamíferos, se produce la infección USA: Lea & Febiger, 1984. .
que genera ejemplares adultos al cabo de 3 a 4 Bortoletti G, Gabriele F. Mechanisms of protective im­
semanas. munity in Hymenolepis nana mouse model. Para­ DEL TUBO DIGESTIVO
La infección humana se describe con mayor fre­ sitología 1992; 34:17-22.
cuencia en ninos que en adultos, la cual es general­ Khalil HM, Shimi S. Recent study of Hymenolepis nana ANTONIO ATIAS
mente beninga y autolimitada. infection in Egyptian children. J Egypt Soc Parasitol
El cuadro clínico es inespecífico y se presenta 1991; 21:293-300.
con inapetencia y diarrea ocasional. El diagnóstico Makarova IA, Astafev BA. The clinic immunological
se basa en el reconocimiento de los huevos caracte­ characteristics of hymenolepiasis. Med Parasitol Mosle
rísticos encapsulados y más comúnmente, la presen­ 1992; 3:40-3.
cia de proglótidas en las deposiciones o alrededor Makled MK, Mohamed NH, Soffor SA. Effect of immu­ En los capítulos precedentes se han descrito los Para el diagnóstico se ha recomendado el em­
del ano. El tratamiento se realiza con prazicuantel en nomodulation on experimental Hymenolepis nana in enteroparásitos de especial trascendencia en Améri­ pleo de técnicas de fijación de la deposición con
dosis única de 20 mg/kg. mice. J Egypt Soc Parasitol 1994; 24:211-22. ca Latina. Sin embargo, el tubo digestivo del hombre alcohol polivinílico (PVA) y su análisis mediante
La prevención consiste en reforzar las medidas
higiénicas para evitar la presencia de los hospederos
Mangoud AM, Elisa MH, Abdallah MA. Pathological and
immunopathological changes in albino mice experi­
puede albergar otra inmensa variedad de especies de
parásitos. Ellos no han sido abordados en capítulos
técnicas de concentración y tinciones adecuadas. Se
ha recomendado el tratamiento con diyodohidroxi­ i 1

intermediarios de esta infección, además de des­ mentally infected with Hymeno/epis nana. J Egypt separados por escapar a los objetivos de este texto, quinolina en dosis de 30 a 40 mg/kg día por 21 días,
parasitar periódicamente a los animales domésticos. Soc Parasitol 1991; 21:43-51. sea porqne, siendo relevantes, no son prevalentes en y metronidazol 250 mg 3 veces al día por una sema­
Mason PR, Patterson BA. Epidemiology of Hymenolepis ¡' nuestro continente, o bien por su relativa rareza. No na.
nana infections in primary school children· in urban
¡ obstante, hemos creído de interés agrupar a los más La profilaxis más recomendada es la aplicación
BIBLIOGRAFIA and rural communities in Zimbabwe. J Parasitol 1994; importantes. de medidas que permitan controlar el fecalismo,
80:245-50. mientras no se aclaren los mecanismos de transmi­
Asano K, Muramatsu K, Okamoto K. Hymenolepis nana: Mercado R, Arias B. Infecciones por Taenia sp. y otros PROTOZOOS PATOGENOS sión de la infección.
adoptive transfer of protective immunity and delayed cestodos intestinales en pacientes de consultorios y
type hypersensitivity response with mesenteric lymph hospitales públicos del sector norte de Santiago, Chi­ Die11ta111oebafragilis. Fue descrita en 1918 y se PROTOZOOS COMENSALES
node cells in mice. Exp Parasitol 1991; 72:24-32. le. 1985-1994. Bol Chil Parasitol 1995;50:80-3. ha observado en distintas partes del mundo. Por
Asanó K, Muramatsu K, Okamoto K. Macrophages in Schenone H. Praziquantel in the treabnent of Hymenolepis mucho tiempo fue considerada como nn amebino; Diversas encuestas coproparasitológicas efectua­
protective immunity to Hy111e110/epis nana in mice. nana infections in children. AITi J Trap Med Hyg sin embargo, estudios experimentales sugieren su das en poblaciones humanas aparentemente sanas,
lmmunol Cell Biol 1992; 70:417-20. 1980; 29:320-1. relación con los flagelados y particularmente con los demuestran la presencia de protozoos comensales en
Beauer PCH, Jung RC, Cupp EW. Cyclophyllidean tape- géneros Histo111onas y Tricho111onas. las deposiciones. Por lo general, las prevalencias
Morfológicamente sólo se ha identificado la for­ tanto en adultos como en niños, oscilan entre 25 y
ma trofozoítica. Es pequeña, mide 3 a 22 µm, presenta 45%, pero en grupos de alto riesgo (inmunocompro­
un solo núcleo (la observación, en algunas ocasio­ metidos) estas cifras se elevan a 48,5%.
.t.
1

nes, de dos núcleos está relacionada con la repro­ La detección de los diversos comensales es con­
ducción por fisión binaria). En estos trofozoítos se· siderada un índice de contaminación fecal, ya que la
diferenciaclaramente un endo y un ectoplasma;emite gran mayoría se contrae por fecalismo. Todos ellos
pseudopodios hialinos, que pueden ser lobulados o tienen por hábitat el intestino, con excepción de
de bordes dentados. E11ta111oeba gingivalis y Trichomonas tena,--,:, de lo­
Su hábitat es el intestino grueso, y si bien su calización bucal.
mecanismo de transmisión se asocia a fecalismo, se Un factor importante para su detección es el
ha sugerido que pudiera ser transportada por los método de diagnóstico empleado, ya que si bien la
huevos de nematodos parásitos comunes, por ej. gran mayoría se pesquisa por los métodos de Tele­
Enterobit1s ver111icu/aris. Las prevalencias descritas mann modificado (MTM) y la técnica de Burrows
oscilan entre 0,5 y 19%, siendo baja en la población (PAF), otros requieren de fijadores y técnicas ade­
general (1%) y más alta en pacientes provenientes de cuadas para lograr observarlos y diferenciarlos (véase
instituciones para enfermos mentales (36 a 51%) y la Sexta Parte: El Diagnóstico de Laboratorio). Los
en centros de cuidado intensivo para niños (9%). comensales más frecuentemente detectados al exa­
Se ha discutido el rol patógeno de Die/1/amoeba men coprológico corriente son:
fragilis, la cual si bien no invade los tejidos, provoca E11ta111oeba coli (16 a 44%), Endo/imax nana
fenómenos inflamatorios a nivel de las· criptas glan­ (11 a 43%), Joda111oeba biitschlii (3 a 16%), Chilo-
dulares, con hipersecreción de moco e hipermotilidad 111astix mesnili (4%), E11teromo11as hominis (11%),
intestinal. Los cuadros agudos se observan princi­ Entamoeba hart111anii (10%) Tricho111011as hominis
palmente en niños y se caracterizan por diarrea y (30%).
dolor abdominal. En la etapa crónica se agregaría_ Para una mejor comprensión, podemos clasificar
náuseas, flatulencia, constipación, anorexia y eosino­ a los comensales intestinales en dos grandes gru­
filia en el 50% de los casos. pos: amibas y flagelados.
21_8 PARASITOLOGIA MEDICA OTROS PARAS/TOS Y COMENSALES DEL TUBO DIGESTIVO 219

Amibas La E. coli es un protozoo luminal, el cual no ha prevalencia es menor a Entamoeba co/i y E. nana, me, presenta un gran citostoma. Posee cuatro flage­
demostrado un rol patógeno. Su profilaxis está diri­ puede llegar al 40%. los: tres anteriores y uno que yace en el fondo del
Género Entamoeba gida a mejorar la disposición de excretas y los hábi­ El diagnóstico de este protozoo no patógeno del citostoma y que tiene dirección posterior. Presenta
tos de higiene de la población. hombre se efectúa por el examen seriado de deposi­ un núcleo esféríco con uno o varios bloques de
E11ta111oeba gillgivalis. Su hábitat es la boca del ciones, empleando técnicas de concentración y cromatina. Los quistes son de aspecto de pepas de
hombre. Vive en las encías, alrededor de los dientes, E11tamoeba ltart111a1111i. Esta amiba ha sido cau­ tinciones ricas en yodo que permitan teñir la vacuola uva, miden de 7 a 9 µm de largo, presentan un núcleo
principalmente si hay procesos inflamatorios o pio­ sa constante de confusión; incluso, se le ha descrito de glicógeno. esférico con toscos gránulos de cromatina y un grue­
rrea. También se encuentra en bocas sanas y con como una raza pequeña de E. histolytica. Actual­ La profilaxis está dirigida a mejorar las condi­ so filamento oscuro, y tienen una prominencia re­
buena higiene. mente se ha demostrado claramente la existencia de ciones de saneamiento ambiental y los hábitos higié­ dondeada en el extremo anterior en forma de pezón.
Sólo presenta la forma vegetativa. El trofozoíto diferencias morfológicas y biológicas entre ambas. nicos de la población. Se tiñen generalmente de color verde claro. Estos
mide 20 µm de diámetro, con un endoplasma gra­ Tanto la forma vegetativa como el quiste son de quistes son las formas infectantes para el hombre. Su
nuloso y un ectoplasma claro. El núcleo esférico menor tamaño que E. histolytica y más parecido al Género Endolimax hábitat es el colon del hombre, donde se multiplican
mide 2 a 4 µm, presenta una membrana nuclear tamaño de Endolimax nana. El trofozoíto mide de 4 por fisión binaria. La transmisión ocurre por fecalis­
remarcada por gránulos de cromatina y un cario­ a 12 µm, no ingiere glóbulos rojos y es menos móvil Numerosas especies de este género se han des­ mo y es el flagelado comensal de mayor frecuencia
soma central. Se multiplica por fisión binaria. La que el de E. histolytica. El núcleo, por su parte se crito en huéspedes vertebrados e invertebrados. La en el examen de deposiciones de la población gene­
fonna de transmisión es directa a través de gotitas de parece más al de E. co/i en la forma y distribución de característica más importante de este grupo es el ral; el diagnóstico, obviamente, se efectúa a través
saliva, por estrecho contacto con un individuo infec­ la cromatina y en el cariosoma. núcleo vesicular que contiene un gran cariosoma de del e_xamen seríado de deposiciones y la profilaxis
tado. La prevalencia en individuos sanos es de l O a El quiste mide 5 a 1O µm, tiene entre dos y cuatro aspecto irregular. está dirigida al mejoramiento de la higiene personal
15% y en individuos con poca higiene bucal, de 70 núcleos y un citoplasma de aspecto granuloso como y ambiental.
a 95%. Aunque no es patógena, generalmente se el de E. coli. E11doli111ax 11a11a. Es una amiba pequeña, cuya Al Ch. mesnili se le han atribuido ciertas formas
asocia junto a Trichomonas tenax a enfermedades Como todas las amibas, se multiplica por fisión forma trofozoítica mide alrededor de 1 O µm. El cito­ de diarrea crónica, aunque ello no ha sido fehacien­
de la boca. binaria y se transmite por fecalismo. No existen cla­ plasma presentá un endoplasma granuloso y temente demostrado.
El diagnóstico se efectúa por la visualización de ros antecedentes con respecto a la prevalencia, pues vacuolado y un ectoplasma claro. El núcleo peque­
la Entamoeba gingivalis en el material obtenido del por lo general las cifras descritas han sido producto ño, esférico, tiene un gran cariosoma central o ex­ Retorta111011as i11testi11alis. Es un flagelado de
borde de las encías. La profilaxis va dirigida a la de la confusión con E. histolytica. céntrico, altamente refringente a la observación mi­ frecuencia extremadamente rara, lo que genera du­
debida higiene bucal. El diagnóstico se basa en la identificación y di­ croscópica. Se multiplica por fisión binaria. El quis­ das sobre su hábitat en el colon del hombre y lo que
ferenciación de E. histolytica mediante medición de te mide alrededor de 8 µm, es ovalado y por lo induce a señalar que pudiera ser un comensal acci­
E11ta111oeba coli. Es el comensal más frecuente los elementos en frotis fecales teñidos con hema­ general sus cuatro núcleos son de localización ex­ dental.
del intestino grueso del hombre, y su forma trofo­ toxilina férrica. céntrica. Los trofozoítos son pequeños, miden 7 µm, po­
zoítica generalmente se confunde con Entamoeba La profilaxis debe dirigirse al control del fecalis­ El hábitat de E. nana es el lumen del intestino seen un citostoma y dos flagelos anteriores con un
histolytica. mo en la población. grueso; el mecanismo de infección es por la inges­ núcleo de localización anterior. Los quistes son
El trofozoíto mide de i 5 a 50 µm y su citoplasma tión de quistes en alimentos o bebidas contaminadas piriformes, uninucleados. Se multiplican, como los
es muy granuloso, lo que impide la clara diferencia­ Género Iodamoeba con deposiciones. Su distribución es muy amplia y otros flagelados, por fisión binaria longitudinal. Su ··
ción entre ecto y endoplasma. En las preparaciones su prevalencia es similar a E. coli (1O a 30% en presencia es rarísima en el examen seriado de depo­
al fresco, se le observa con movimientos lentos y lodamoeba biitsc/1/ii. Su nombre genérico deri­ poblaciones generales). No produce daño y su diag­ siciones y se recomienda para el diagnóstico, em­
pseudopodios cortos y anchos. En los preparados va de la constante presencia tanto en el trofozoíto nóstico, al igual que las otras amibas del hombre, se plear frotis fecales teñidos con hematoxilina que
fijados y teñidos, se aprecia el núcleo con gránulos como en el quiste, de una vacuola de glicógeno al­ efectúa a través de examen seriado de deposiciones. facilita su observación. Como el mecanismo de trans­
de cromatina irregular en la periferia, adheridos a la tamente yodofilica. Su'distribución es mundial, pero La profilaxis está dirigida a solucionar los proble­ misión es el fecalismo, las medidas profilácticas
membrana nuclear, y un nucléolo grande y excéntri­ la prevalencia es menor que Entamoeba coli. mas asociados al fecalismo. deben dirigirse a solucionar los problemas asocia­
co. El prequiste, fonna que aparece en el momento El trofozoíto mide entre 6 y 20 µm y en su cito­ dos con esta forma de transmisión.
en que el medio ambiente se le hace adverso, presen­ plasma se confunden el ecto y el endoplasma, ade­ Flagelados
ta en su interior una gran vacuola glucogénica y dos más presenta una discreta vacuola de glucógeno. El E11tero111011as /10111i11is. Es un flagelado comen­
núcleos en la periferia del ectoplasma. El quiste núcleo posee un gran cariosoma rico en cromatina, Orden Retortamonadida sal del hombre raramente descrito, muy parecido a
generalmente posee ocho núcleos y es de mayor ta­ que en ocasiones hace dificil la diferenciación de sus Ch. mesnili, pero la diferencia estriba en que sus
maño que el de Entamoeba histolytica (25 µm) con caracteristicas internas. Los miembros de este género son comensales del quistes son binucleados. El trofozoíto mide 4 a 10
gran cantidad de inclusiones citoplasmáticas. Las El quiste es ovoide, a veces esférico, mide 6 a 12 ciego y el colon del hombre y otros animales verte­ µm, posee tres flagelos anteriores y el cuarto flagelo
características nucleares son similares a las del tro­ µm, también es uninucleado, aunque en algunas brados. Miden de 5 a 15 µm y se caracterizan por está adosado al cuerpo. Los quistes ovales son gene­
fozoíto. ocasiones pueden encontrarse quistes binucleados. tener entre dos y cuatro flagelos y un citostoma en el ralmente binucleados, aunque pueden tener cuatro
La E. coli se transmite por fecalismo, de forma Su característica fundamental es la presencia de una extremo anterior. Se distinguen tres géneros de acuer­ núcleos.
similar que E. histolytica. Su distribución es mun­ gran vacuola yodófila rica en glicógeno. do al nacimiento del flagelo: Chilomastix, Retorta­ Se multiplican por fisión binaria en su hábitat, el
dial, y las prevalencias oscilan entre 1O y 40%. En Se reproduce por fisión binaria y su hábitat es el monas y Enteromanas. lumen cecal. Para su diagnóstico se recomienda la
poblaciones con mal saneamiento ambiental y malos lumen del intestino grueso, fundamentalmente el tinción con hematoxilina de un frotis fecal. No se
hábitos higiénicos, su frecuencia puede ser mayor. ciego. La forma de transmisión es por fecalismo, al Cltilomastú: 111es11i/i. Flagelado del intestino conoce claramente su mecanismo de infecciórt, aun­
El diagnóstico de sus quistes y trofozoítos se ingerirse alimentos o bebidas contaminadas con de­ grueso del hombre y otros animales. El trofozoíto que probablemente sea por fecalismo, por lo cual se
efectúa a través de los métodos coproparasitoscópicos posiciones humanas. Su distribución es principal­ mide de 1O a 15 µm de longitud, de aspecto pirifor- recomienda mejorar la higiene personal y colectiva.
corrientes. mente en zonas de clima tropical, donde si bien su

l..
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220 PARASITOLOGIA MEDICA OTROS PARAS/TOS Y COMENSALES DEL TUBO DIGESTIVO 221 1
1
i 1

Orden Trichomonadida de localización gástrica el diagnóstico se logra me­ Physaloptera ca11casica. Este nematodo se en­ La sintomatología del hombre no varía a la ob­
diante la endoscopia, examen que se aprovecha para cuentra en monos del Africa, los cuales parecieran servada en las teniasis. El tratamiento indicado es
Dos flagelos comensales de este orden tienen la extracción de la larva. En los casos de localización ser sus hospederos principales. Son elongados y con prazicuantel y con niclosamida.
por hábitat el tubo digestivo del hombre: Trichomo- intestinal, el diagnóstico es más dificil y sólo se delgados, semejantes al áscaris juvenil, y viven en el
110s tenax y Trichomonas lwminis; ambos se estu­ comprobará por la laparotomia exploradora impuesta intestino delgado al cual se fija por un par de labios Bertiel/a st11deri. Cestodo común en monos de
dian en el Capítulo 32: Tricomonosis. por el abdomen agudo. de su abertura bucal. Su ciclo biológico no es bien Asia y de Africa, que ocasionalmente puede afectar
conocido y se cree que las cucarachas y los escara­ al hombre que habita en esos continentes. Mide unos
NEMATODOS Triclwstro11gyllls spp. La tricostrongilosis es pro­ bajos podrían ser sus hospederos intermediarios. Se 30 cm de largo por I de ancho. Posee un escólex con
ducida por diversas especies de Trichostrongylus, le ha encontrado ocasionalmente en el hombre en cuatro ventosas y un rostelo inenne. Algunos ácaros
A11isakis y Pse11doterra11ova (Anisakiosis). La parásitos del intestino de mamíferos domésticos y Africa, Brasil, India e Israel. Su acción patógena es coprofilicos son los hospederos intermediarios, los
ingestión de pescado crudo, ahumado o salado, como ocasionalmente, del hombre. Es prevalente en algu­ poco conocida y, probablemente, irrelevante. El diag­ cuales, al ser ingeridos, provocan la infección de los
el cebiche o sachimi, expone al hombre a adquirir la nas zonas rurales del Japón y de Egipto, y ocasional­ nóstico se efectúa por el hallazgo de huevos, ya hospederos definitivos. La sintomatología es similar
anisakiosis, infección parasitaria producida por ne­ mente se describe en América Latina. Los gusanos embrionados en el momento de la postura, y que a la de las demás lombrices solitarias y su tratamien­
matodos de los génerosAnisakis y Pse11doterranova. son pequeños, menores de 1 cm y se localizan en la miden unos 50 x 40 µm. to es con prazicuantel y niclosamida.
Los anisákidos adultos tienen su hábitat en el mucosa del intestino delgado. Se eliminan huevos al
estómago de diversos mamiferos marinos (focas, exterior y en pocas horas se forma la larva infectante, 0esophagostom11m spp. Varias especies de Oe- TREMATODOS
lobos marinos, ballenas, delfines, etc.). Los huevos la cual alcanza al hospedero por vía cutánea o, lo más . sophagostomum parasitan el intestino de diversos
de estos nematodos caen al mar con las heces de común, por vía oral. Habitualmente la infección del mamíferQs. Son nematodos estrongiloideos pareci­ Existe un grupo de trematodos intestinales que
estos hospederos definitivos y liberan una larva 12 hombre es asintomática, salvo en los raros casos de dos al Ancylostoma por su aspecto y tamaño, y de pueden afectar al hombre. Estas infecciones son pre­
que nada libremente y puede ser ingerida por crus­ infección masiva, en las cuales hay signos de ente­ los cuales se sabe poco de su biología. Es una infec­ valentes en Asia y se adquieren por la ingestión de
táceos microscópicos (primer hospedero intermedia­ ritis con diarrea, hemorragia y anemia secundaria. El ción prevalente en Africa. En el hombre se le encuen­ pescados crudos o vegetales que crecen en el agua.
rio), en los cuales se desarrolla la larva 13, la cual, a diagnóstico se efectúa por el hallazgo de los huevos tra en el ciego e intestino grueso, donde las larvas Las más importantes de estas trematodosis intesti­
su vez, es infectante para los peces (segundo hos­ en las heces; estos huevos son semejantes a los de se encapsulan y forman nódulos de I a 2 cm de nales son las provocadas por Fasciolopsis bus!.i,
pedero intermediario). En los peces, la larva 13 se Ancylostoma, aunque son más elongados. El trata­ diámetro, de los cuales emergen los gusanos adul­ Echinostoma spp, Heterophyes heterophyes, Me­
establece en la cavidad peritoneal donde alcanza miento indicado es el pamoato de pirantel. tos, los que se fijan a la mucosa intestinal. Los nó­ tagonimus yokogawai y Gastrodiscoides hominis.
unos 3 cm de longitud. Cuando los peces infectados dulos tumorales (helmintomas) se remueven qui­
son ingeridos por los hospederos definitivos, la lar­ Capillaria philippi11e11sis. La Capil/aria phi­ rúrgicamente y se debe hacer el diagnóstico diferen­ Fascio/opsis b11s/ci. Es el más grande de los
va alcanza al estado adulto. Si el pez infectado con lippinensis provoca la capilariosis intestinal, distin­ cial con neoplasias, afecciones inflamatorias, tuber­ trematodos intestinales del hombre. Mide entre 2 y
13 es ingerido por otro pez, la larva liberada en el ta a la capilariosis hepática producida por Capillaria culosis y amibomas. 7,5 cm de largo por 2 cm de ancho. Es de aspecto
intestino pasa a la cavidad peritoneal del nuevo hepatica. Es un nematodo muy pequeño de 2 a 4 mm, carnoso, carece de cono cefálico y sus dos ventosas
hospedero intermediario paraténico y puede perpe­ siendo la hembra algo más grande; pertenecen a la CESTODOS están muy cerca entre sí. Se le encuentra sujeto a la
tuarse el ciclo en nuevos peces en esta relación super familia Trichuroidea al igual que Triclzinella mucosa del duodeno y yeyuno, pero en las infeccio­
predador-presa. sp. y Trichúris trichiura. Vive en la mucosa del Inermicapsifer sp. Railletina sp. Estos dos gé­ nes masivas puede invadir todo el intestino delgas·
El hombre se infecta al ingerir carne de pescado duodeno, yeyuno y parte alta del íleon. Las hembras neros de cestodos parasitan a los roedores y espo­ do.
crudo (principalmente merluzas, congrios y jureles) colocan huevos con dos tapones mucosos (típicos rádicamente al hombre. Morfológicamente son se­ Su ciclo evolutivo es similar al de Fasciola he­
infectados con larvas 13 y se comporta corno un del género y que recuerdan el aspecto de los huevos mejantes, pero la diferencia fundamental está en el patica. El gusano adulto alojado en el intestino del­
fallido hospedero definitivo. En la mayoría de los de T. trichiura), los cuales salen al exterior con las escólex: Railletina posee una corona de ganchos e gado de sus hospederos definitivos, el hombre y el
casos, a las pocas horas o uno o dos días después heces y deben madurar en el medio ambiente por un Jnermicapsifer es inerme. La estróbila mide 40 cen­ cerdo, elimina huevos elípticos operculados seme­
de una comida de pescado crudo, se produce dolor periodo de unas dos semanas, tiempo adecuado para tímetros o más de largo por 7,5 mm de ancho y las jantes a los de F. hepatica y de considerable tamaño
de garganta, sensación de cuerpo extraño y ahogos que se larve. Los huevos larvados son las formas proglótidas grávidas presentan cápsulas ovígeras con ( 130 a 140 µm de largo por 80 a 85 µm de ancho) y
que culminan en vómitos con la expulsión del gusa­ infectantes para algunos peces en cuyo intestino se numerosos huevos en su interior. Se desconocen los son arrastrados al ambiente con las heces del hospe­
no. Si la larva penetra al estómago o al intestino desarrolla la larva. El hombre, su único hospedero ciclos biológicos. dero. El desarrollo de los huevos continúa en el agua
delgado, se profundiza en la mucosa provocando definitivo demostrado, se infecta al ingerir peces No existe consenso en cuanto a las diferentes y, bajo condiciones de temperatura adecuada, origi­
una reacción inflamatoria granulomatosa eosinofilica crudos o mal cocidos. especies que integran estos géneros de cestodos. En nará un miracidio que penetra a su hospedero inter­
que envuelve a la larva. En la localización gástrica la Los primeros casos humanos de capilariosis in­ el género Inermicapsifer se distinguen dos especies: mediario constituido por caracoles planorbideos,
sintornatología aparece cuatro a seis horas después testinal fueron descritos en la década del 60 y la J. madagascariensis e J. cubensis, pero muchos au­ donde cumplirá las fases de reproducción asexuada.
de la ingestión de pescado y se caracteriza por dolor infección es prevalente en Filipinas y Tailandia. La tores no las consideran diferentes. Mientras la pri­ Las cercarías que emergen del caracol, nadan y se
abdominal, náuseas y vómitos. Cuando la larva se infección provoca una enteritis que se manifiesta por mera es prevalente en Africa y en Madagascar, la J. enquistan en castañas de agua, loto, bambú y otras
establece en el intestino, la sintomatología se pre­ una violenta diarrea con pérdida importante de agua cubensis se describe en Cuba y Venezuela. En Rai­ plantas comestibles acuáticas. El hombre se infecta
senta siete días postingestión de la comida infec­ y electrólitos, y un síndrome de malabsorción que llelina existe la R. celebensis, de unos 60 cm, la cual al ingerir metacercarias contenidas en estas plantas
tante y puede dar lugar a un cuadro de abdomen puede llevar a la deshidratación y la muerte. El diag­ es prevalente en el Asia Sudorienta! y la R. de­ acuáticas, ya sea al comerlas crudas o al triturarlas
agudo, con dolor abdominal severo, vómito y dia­ nóstico se efectúa por el hallazgo de los huevos en merariensis (sinónimos R. quitensis y R. equa­ con los dientes.
rrea. las heces. El tratamiento de elección es con toriensis), de unos 12 cm, que se encuentra en roe­ La intensidad de la sintomatología se explica
El diagnóstico de sospecha se establece por el niebendazol 400 mg/día/20-30 días. La prevención dores de la América Tropical y en ciertas'zonas por el tamaño de los gusanos, por su número, Y por
antecedente de ingestión de pescado crudo y se se logra con la abstinencia de ingestión de peces rurales cercanas a Quito, Ecuador, en donde tiene las lesiones provocadas en la mucosa al aferrarse a
confirma al recuperar la larva vomitada. En los casos crudos. una prevalencia de 5% en los niños. ella. Produce focos inflamatorios, ulceraciones que
HISTO Y HEMOPARASITOSIS
2n PARASITOLOGIA MEDICA
Capítulo 25
pueden llegar a la hemorragia y obstrucción intes­ infección es por pocos parásitos, es asintomática;
tinal. La principal sintomatología es la diarrea pro­
fusa y dolores cólicos intestinales, con compromiso
pero en las infecciones masivas, se presenta diarrea
y cólicos intestinales. El diagnóstico se efectúa me­ CARACTERJSTICAS GENERALES DE LAS
variable del estado general.
El diagnóstico se efectúa mediante el hallazgo
diante el hallazgo de los huevos, los cuales son pa­
recidos a los de Clonorchis. HISTOPARASITOSIS Y HEMOPARASITOSIS
de huevos en las heces. El tratamiento de elección También el tratamiento de elección es con
es con prazicuantel 25 mg/kg durante 1 día, o bien prazicuantel 25 mg/kg por I día. La profilaxis con­ ANTONIO ATIAS
con tetracloroetileno 0,1 a 0,2 mL/kg con una dosis siste en la abstinencia de ingerir pescados crudos o
máxima de 5 mL. La profilaxis individual se consi­ mal cocidos.
gue absteniéndose de ingerir vegetales crudos en las
zonas endémicas. Jl!Jetago11i11111s yolcogawai. Tan pequeño como Las parasitosis cuyos agentes tienen su hábitat en que en esta época de fácil desplazamiento de un
el anterior, este trematodo infecta el intestino del los tejidos y en la sangre del hombre, presentan cier­ lugar a otro de la tierra, puede ocurrir que el paciente
Ec/1i11osto111a spp. Los equinostomas son trema­ ! hombre y de animales ictiófagos de gran parte del tos rasgos .comunes que conviene conocer para efec­ se haya infectado meses y hasta años antes de la
todos digenéticos de pequeño tamaño (alrededor de Asia y de algunas regiones de los Balcanes, Grecia tuar nn adecuado diagnóstico diferencial entre ellos aparición de la sintomatología.
1 cm de largo por 0,2 a 0,3 cm de ancho) y son y España. Tiene un ciclo evolutivo semejante al y con respecto a otras etiologías. Algunas de estas Por el íntimo contacto con los tejidos es común
parásitos muy comunes del intestino de vertebrados Heterophyes. Si la infección es leve, no tiene rele­ parasitosis tisulares son tratadas en otras secciones que el hospedero reaccione inmunológicamente con
semiacuáticos. Su nombre deriva de un característi­ vancia clínica, pero provocará diarreas importantes de este libro, como la amibiasis extraintestinal y el más vigor que en las enteroparasitosis, lo que expli­
co collar de espinas que rodea a la ventosa oral. si se encuentra infectando en gran cantidad. El tra­ síndrome de Loeffler o el pulmón eosinofilico. (Véase caría la mayor sintomatología derivada de la acción
De los huevos operculados, que son muy seme­ tamiento y la profilaxis son similares a las del Hete­ los Capítulos 16: Ascariasis y 48: Parasitosis del expoliativa, mecánica y destructora de parénquimas,
jantes a los de otros trematodos intestinales o hepá­ rophyes. pulmón). los fenómenos de atrofia, la hipertrofia o la hi­
ticos, emerge el miracidio que penetra a caracoles de En la Tabla 25-1 se resumen las características perplasia, o los mecanismos de hipersensibilidad.
agua dulce, donde se multiplica dando origen a dos Gaslrodiscoides lw111i11is. Este pequeño nemato­ biológicas de las principales histo y hemoparasitosis Por otra parte, esta misma característica de reacción
generaciones de redias y a las cercarías. Estas últi­ do, que mide entre 5 a 1O mm, parasita al cerdo y al del hombre que son tratadas en este libro. Se hace del hospedero deriva en la formación de anticuerpos
mas abandonan al caracol y se enquistan como me­ hombre. Se le ha descrito en India, Vietnam, Filipi­ hincapié en variadas formas infectantes para el l10m­ sérícos o tisulares que pueden ser detectados con
tacercarias en otros moluscos o peces de agua dulce. nas y URSS. Su ciclo se desconoce. Se localiza en el bre y los diversos y complejos mecanismos de trans­ fines diagnósticos.
El hospedero definitivo se infecta con estas metacer­ ciego y el colon ascendente y provoca una diarrea misión. El cuadro clínico de las histo y de las hemopa­
carias·contenidas en esos caracoles o peces. mucosa. El diagnóstico se efectúa por el hallazgo en La mayoría de estas parasitosis son zoonosis rasitosis es, en la mayoría de ellas, polimorfo y poco
El rol patógeno de los equinostomas en el hom­ las heces, de huevos operculados que miden 150 por parasitarias, enfoque que permite su estudio no sólo característico. Tal vez en la malaria la aparición de
bre es poco importante, COI] algún grado de daño en 60 µm. Probablemente el tratamiento sea eficaz con desde el punto de vista del daño ocasionado a la una curva febril con los caracteres de la terciana y de
la mucosa intestinal que pudiera provocar diarreas. prazicuantel. salud del hombre, sino que ayuda, en muchos casos, la cuartana, despierte la sospecha que permita un
El diagnóstico se efectúa por hallazgo de los huevos a mensurar el daño económico al incidir en una diagnóstico más sencillo. Pero, en todos estos tipos
en las heces, aunque es muy dificil diferenciarlos de ACANTOCEFALOS menor producción pecuaria de carne, de leche o de de parasitosis, el médico deberá plantearse un pe1jil
los huevos de Fasciola hepatica o de otros tremato­ lana. sintomatológico básico en su presunción diagnósti­
dos. El tratamiento es con prazicuantel 25 mg/kg Las características generales y el complicado ciclo Los antecedentes epidemiológicos son de mu­ ca. En la triquinosis este perfil puede configurarse
durante 1 día, o con tetracloroetileno O, 1 a 0,2 mUkg. biológico de estos helmintos han sido explicados en cha utilidad en la investigación de las parasitosis con el síndrome febrjl, los síntomas oculopalpebrales,
La profilaxis individual consiste en abstenerse de el Capítulo 1: El parásito. La infección del hombre tisulares. Puede ser que el enfermo sea uno de va­ las mialgias y la eosinofilia. En la fasciolosis, los
ingerir moluscos o peces crudos en zonas de ende­ es muy rara y es debido a las especies Macracantho­ rios miembros del grupo familiar, infectados por la signos y los síntomas son atribuibles al árbol biliar
mia. rynclws hirudinaceus y Moniliformis mo11i/ifor111is, ingestión de alimentos con las formas infectantes, y la eosinofilia. En la hidatidosis es sugerente el
gusanos que miden entre 1O y 20 cm de largo. La tal como ocurre en la triquinosis o en la fasciolosis. descubrimiento de una masa en cualquiera de los
Heteropltyes lteteropltyes. Es un trematodo muy infección se adquiere por la ingestión de escarabajos En este tipo de infecciones, es conveniente investi­ órganos de un paciente con buen estado general. En
pequeño (1,5 mm de largo por algo más de 0,5 mm infectados. Los gusanos se fijan a la mucosa del gar a todo el grupo familiar, no porque el caso la neurocisticercosis, la aparición de signos de un
de ancho) que infecta el intestino del hombre y de intestino delgado mediante su proboscis y pueden índice sea la fuente de contagio, sino porque los proceso encefálico expansivo y síntomas psiquiá­
animales ictiófagos de países asiáticos, centroeu­ provocar síntomas digestivos leves o graves, con mecanismos de transmisión hacen propicia la in­ tricos es orientador. Así como en la enfermedad de
ropeos, Egipto e Israel. Actúan como primer hospe­ inflamación local, diarreas y, en ocasiones, perfora­ fección simultánea de varios individuos, en estre­ Chagas lo es la aparición de cuadros meningoen­
dero diversos géneros de caracoles marinos y, como ción intestinal. El diagnóstico se hace por el hallaz­ cha convivencia. El mecanismo de transmisión de cefálicos agudos en los niños menores -como ocurre
segundos, algunos peces de mar. El hombre se infec­ go de huevos relativamente grandes que encierran hombre a hombre es más bien raro, pero es funda­ en determinadas regiones de Latinoamérica- y los
ta al ingerir estos peces crudos o mal cocidos. Si la un acantor desarrollado. mental en la diseminación de las cisticercosis del cuadros de cardiomiopatía y los "megas" de órganos
hombre y de la tricomonosis. huecos. En fin, esta escueta enumeración de los per­
La procedencia del enfermo es otro dato de inte­ files sintomatológicos básicos, dados como ejem­
rés, sobre todo cuando se trata de las infecciones en plos, puede ser aplicada a todas las parasitosis de la
las cuales participan vectores biológicos que sólo se sangre y de los tejidos.
encuentran en determinadas zonas geográficas, como Una vez planteado este perfil, se debe llegar al
ocurre en malaria, enfermedad de Chagas, leishma­ diagnóstico, que siempre es dificil por la carencia de
niosis, en la esquistosomosis y en otras helmintosis. signos patognomónicos. Para ello, es indispensable
La anamnesis debe investigar esta posibilidad, por- el uso de los exámenes de laboratorio.

l.
i)�,
PARASITOLOG/A MEDICA CARACTERJSTICAS GENERALES DE LAS HISTOPARASITOSIS y HEMOPARASITOSIS 225

TABLA 25- 1 Larvas migrantes Ancy/ostoma bra- Larvas filariformes Penetración activa por la piel
CARACTERISTICAS GENERALES DE LAS PRINCIPALES HISTO Y HEMOPARASITOSIS DEL HOMBRE cutáneas zilense, A. caninum

Parasitosis Age11tes Formas i11fectantes Mecanismos de infección Larva migrante vis- Toxocara canis, Huevos Ingesta de agua o vegetales,
para el hombre cera! o toxocarosis T. cati contacto con tierra contaminada
l. PROTOZOOS Dracunculosis Dracuncu/us medí- Larvas Ingestión de crustáceos micros­
Malaria Plasmodium spp. Esporozoítos Picadura de Anopheles, nensis cópicos (copépodos).
transfusiones, transmisión
Gnatostomosis Gnathostoma spinigerum Larvas Ingestión de carnes o copépodos
congénita.
infectados con larvas L3.
Leishmaniosis leish111a11ia spp. Promastigotos Picaduras de flebótomos.
Dioctofimosis Dioclophyma renale Larvas Ingestión de peces infectados
Enf. de Chagas T1ypa11osoma cruzi Tripomastigoto Deyecciones de triatominos,
transmisión congénita,
transfusiones, trasplantes.
III. CESTODOS
Enf. del sueño T1yp_a11oso111a br,,cei Tripomastigoto Picadura de moscas (G/ossi11a sp.)
Hidatidosis Echi11ococc11s sp. Huevos Contaminación con heces de
Toxoplasmosis Toxop/asma go11dii Ooquistes, quistes, zoítos Heces de gato, carnes, transmisión
congénita, transfusiones en perros y otros carnívoros.
inmunocomprometidos. Cisticercosis Taenia solium Huevos Contaminación con heces
Neumocistosis Pnemnocystis carinii Quistes, trofozoítos Vías aérea por saliva, humanas.
transfusiones
Esparganosis Spiromelra sp. Plerocercoides o es­ Contacto e ingestión de carnes
Microsporidiosis E11cepha/itozoon,E11te­ Esporas Fecalismo ¿carnivorismo? parganos de pescados,anfibios o crustáceos
rocylozoon, Vittaforma,
microscópicos (copépodos)
Nosema; Pleistop!tora,
Microsporidium Cenurosis Taenia seria/is Huevos Contaminación con heces de
Trichomonas vagina/is Trofozoítos Venéreo, leucorrea que contamina perros y otros· cánidos
Tricomonosis
objetos, toallas, agua.
Amibas de vida Naeg/eria, Trofozoítos Baño en aguas cálidas IV. TREMATODOS
libre Aca11thamoeba. contaminadas, aseo descuidado
de lentes de contacto. Esquistosomosis Schistosoma spp. Cercarlas Penetración activa por piel y
Babesiosis o Babesia spp. Merozoítos Picadura de garrapatas. mucosas
Piroplasmosis Paragonimosis Paragonimus spp. Metacercaria Ingestión de crustáceos
infectados
11. NEMATODOS
Fasciolosis Fasciola hepatica Metacercaria Ingestión de berres
Filariosis Wuchereria, Brugia, Larva filariforme Picadura de dípteros hematófagos Clonorquiosis C/011orchis sinensis Metacercaria Ingestión de peces infectados
loa, Ma11so11ella metaciclica
Opistorquiosis Opislorc/zis sp. Metacercaria Ingestión de peces infectados
Oncocercosis 011chocerca volvulus Microfilarias Picadura de Simulium sp.
Triquinosis Trichinella sp. Larvas Ingestión de cerdo y eventual­ Dicroceliosis Dicrocoelium den- Metacercaria Ingestión de hormigas infectadas
mente otras carnes infectadas. driticum

Angiostrongilosis A11giostro11gy/us Larvas lngei;tión de vegetales contami­


abdominal costaricensis nados con secreciones de babosas v. PENTASTOMOSIS
Meningitis Angiostro11gylus Larvas ingestión de moluscos, camarones
eosinofilica canlonensis y vegetales contaminados con Pentastomosis linguallzla serrata, Huevos y ninfas Ingestión de carne de ovejas o
secreci_<lnes de babosas y Armillifer armillatus cabras
caracoles.
226 PARASITOLOGIA .MEDICA Capítulo 26
Los exámenes de laboratorio utilizados en las
histo y en las hemoparasitosis son tratados in exten­
Exámenes complementarios
MALARIA O PALUDISMO
so en Diagnóstico de laboratorio. Sólo con el fin de Hemograma. Revela anemia marcada (malaria) o
leve (fasciolosis, toxoplasmosis y enfermedad de CESARNAQUIRA
esquematizar, clasificaremos estas técnicas en exá­
menes parasitológicos y en exámenes complementa- Chagas). Pero la alteración más importante es la
rios. eosinofi/ia elevada que se observa en las helmintosis
tisulares. (Véase el Capítulo 62: Eosinofi/ia y para­ \:
Exámenes parasitológicos sitosis).

Directos. Persiguen encontrar al parásito: Radiología. Ayuda de indudable valor en la hi­


Definición. Antropozoonosis parasitaria causa- • del macrogameto elemento en que se ha convertido
- en las deposiciones (fasciolosis, esquistoso­ datidosis pulmonar y en el descubrimiento de quis­
da por esporozoarios del género Plasmodium trans­ el macrogametocito al madurar en el interior del es­
mosis) tes hidatídicos calcificados en otros órganos, en las
mitidos por la picadura de mosquitos del género tómago del mosquito.
- en la bilis (fasciolosis) cardiomegalias de origen parasitario (toxoplasmosis
Anopheles. Clínicamente se caracteriza por el acceso
- en la sangre por medio del examen directo, y enfermedad de Chagas), en los "megas" de órga­
palúdico (escalofrío, fiebre y sudoración). El cigoto. El microgameto, en el momento de la
frotis o gota grnesa (enfermedad de Chagas, mala­ nos huecos (enfermedad de Chagas), y en las calci­
fecundación, penetra en el macrogameto y fusionan
¡ ria) ficaciones cerebrales (toxoplasmosis congénita).
BIOLOGIA sus cromatinas nucleares, dando lugar al cigoto,
¡' gas)
- por el xenodiagnóstico (enfennedad de Cha-
Ecografía. y cintigrafía. De gran utilidad en el
célula de unos 20 µm de longitud.
El parásito
\ .1 - en el acto quirúrgico (quiste hidatídico) diagnóstico de absceso hepático amibiano y quistes
El ooqnineto. El cigoto adquiere movimiento y se
- por biopsias o frotis de tejidos (leishmaniosis) hidatídicos de diversas localizaciones.
Cuatro son las especies de Plasmodium que pa­ traslada a la pared del estómago del mosquito, pene­
1 1j - por la expulsión del parásito al exterior, como
rasitan al hombre: Plasmodium vivax, Plasmodium tra hasta su membrana externa donde se enquista,
ocurren en la vómica del quiste hidatídico Tomografía axial computarizada y resonan­
malariae, Plasmodium falcipantm y Plasmodium dando lugar al ooquiste.
- por" inoculación experimental de material de cia nuclear magnética. De primordial importancia
1
ovale.
biopsias o de autopsias (toxoplasmosis, etc.). para el diagnóstico de la neurocisticercosis y de la
Las tres primeras especies se han descrito en El ooquiste. Es el elemento redondeado que au­
toxoplasmosis cerebral. Además, suele dar el diag­
América Latina. El hombre es el único hospedero de menta de tamaño, pudiendo alcanzar alrededor de 50
.Indirectos. Intentan encontrar los anticuerpos nóstico de certeza en hidatidosis (quiste hidatídico
las especies de Plasmodium mencionadas. µm, y hace eminencia en la superficie externa de la
tisulares o séricos. Las reacciones serológicas cons­ hepático o abdominal).
El parásito presenta en su ciclo de vida dos for­ pared del estómago del mosquito. Está rodeado de
1 tituyen un elemento de gran ayuda diagnóstica en la
! 1 mas de reproducción: sexual y asexual (Figura 26-1 una membrana quística y contiene en su interior el
mayoría de las histoparasitosis; algunas de ellas al­ Endoscopia. Sirve para detectar parásitos, vi­
y 26-2). La reproducción sexual ocurre en el Ano­ ooquineto, cuyo citoplasma y núcleo se han dividi­
canzan un alto grado de especificidad y de sensibi­ sualizar lesiones y tomar biopsias.
pheles (hospedero definitivo), y la reproducción do ·en 1ementos alargados de 1O a 12 µm, llamados
lidad. (Reacciones de Sabin y de Feldman, inmuno­ 7
asexual en el hombre (hospedero intermediario). esp�zoítos. Cuando la cantidad de esporozoítos
fluorescencia y hemaglutinación en la toxoplasmo­ De esta manera, al conocer la biología de los
es grande, el ooquiste se rompe y quedan en libertad.
sis; inmunofluorescencia indirecta y .ELISA en la histo y de los hemoparásitos, sus mecanismos de
Reproducción sexual o ciclo esporogónico
enfermedad de Chagas, hidatidosis y cisticercosis, transmisión al hombre y los antecedentes epidemio­
El esporozoíto. Los esporozoítos, al salir del
etc. Las prnebas intradérmicas (Bachman, Casoni, lógicos, se puede configurar un perfil sintomatológico
Se realiza en el mosquito y dura aproximadamente ooquiste y caer a la cavidad celómica del mosquito,
fasciolosis, cisticercosis, etc.), se usan cada vez menos básico, que puede llevar a un diagnóstico exacto,
de siete a catorce días. Comprende los estadios de se trasladan por la hemolinfa hasta las glándulas
debido a la mayor sensibilidad y especificidad de las mediante el uso racional de los exámenes de labora­
gametocitos, gametos, cigoto, ooquineto, ooquiste salivales del mosquito, las penetran, y allí se acumu­
pruebas serológicas. torio específicos y de los complementarios.
y esporozoíto. Esta reproducción es esporogónica, lan para salir al exterior cuando el mosquito pica al
porque en el mosquito da lugar a la formación de hombre susceptible.
esporozoítos. Se inicia con la ingesta de sangre de Así termina la forma de reproducción sexual o
una persona infectada que contenga las formas sexua­ ciclo esporogónico, para dar paso a la forma de
les del parásito, los gametocitos. reproducción asexual en el hombre.

Los gametocitos y gametos. Son intraeritrocitarios. Reproducción asexual o ciclo esquizogónico


El macrogametocito presenta un núcleo compacto de
cromatina, y el citoplasma, extendido por todo el La reproducción asexual presenta dos ciclos o
glóbulo rojo contiene en su interior el pigmento fases: exoeritrocitaria (hepática) y eritrocitaria (san­
malárico de color marrón oscuro. El microgametocito guínea). La fase hepática o exoeritrocitaria compren­
presenta un núcleo laxo, citoplasma similar al macro­ de al esquizonte tisular y al criptozoíto. La fase
gametocito. Ambos gametocitos maduran a game­ eritrocitaria comprende el trofozoíto, el esquizonte,
tos. los merozoítos y los gametocitos. La reproducción
El microgametocito presenta una exflagelación, asexual se suele denominar esquizogónica porque
hasta en número de ocho que contiene parte de la lleva a la producción de esquizontes.
cromatina en que se ha dividido el núcleo. Cada Se inicia con la penetración del esporozoíto al
flagelo constituye un microgameto, que va en busca hombre, en el momento de la picadura y termina con
228 PARASITOLOGIA MEDICA
l MALARIA O PALUDISMO 229

ESPOROGONIA

GAMOGONIA
(e)
esporózoitós

MOSQUITO
HOMBRE
GAMETOGONIA � Ó
(d)
esq·uizonles
A. Evolución sexuada
en Anapheles
CICLO CICLO
ERITROCITICO EXOERITROCITICO

(e) . (b)

MEROGONIA

Figura 26-1. Ciclo evolutivo de Plasmodium spp. El hombre (hospedero intermediario) se infecta con la saliva del
mosquito vector (hospedero definitivo}, la cual contiene los esporozoitos (a) que se multiplican por esquizogonia en las
células del parénquima hepático (ciclo exoeritrocítico) (b). Los merozoitos resultantes penetran a los eritrocitos, en los
cuales se multiplican por esquizogonia con la liberación de nuevos merozoitos (e) por destrucción del glóbulo rojo y
vuelven a repetir este ciclo eritrocitico en plazos de 48 a 72 horas, según la especie de Plasmodium. En el hombre el
proceso culmina con la formación de los gameto� (d) que permanecen en el interior de los glóbulos rojos. El ciclo continúa
cuando el mosquito adquiere la infección al picar, e introduce los gametos a su estómago. A ese nivel se produce la
fertilización o gamogonia (e) con la formación del ooquinete (f) que se dirige a la pared del estómago dando origen al
esporoquiste (g) con miles de esporozoítos en su interior, los cuales al quedar en libertad, invaden la cavidad g•/neral y
glándulas salivales, listos para reanudar el ciclo.

la producción de esquizontes maduros y gametocitos. bulos rojos circulantes, con lo cual termina la fase
Los esporozoítos inoculados se distribuyen por el tisular o hepática. Sin embargo, en el caso de P.
torrente sanguíneo a todo el organismo; sin embar­ vivax y P. malariae, algunos elementos parasitarios
go, ellos van a penetrar a las célula�hepáticas, don­ quedan en el hepatocito y continúan el ciclo esqui­

�,:
de dan lugar a la formación de los esquizontes tisu­ zogónico tisular en forma muy lenta, llamados los
lares, en una fase o etapa que se llama pre-eritrocítica. hipnozoítos, los que serán responsables de las
recidivas. C. Ciclo Eritrocítico B. Ciclo·Pre-eritrocítico
Fase pre-eritrocítica (Figura 26-3): En el caso de Plasmodiumfalcipanim, sólo hay en el hígado
Esquizonte tisular. El esporozoíto penetr¡¡ al un ciclo esquizogónico tisular al inicio de la infec­ (Esquizogonia)
hepatocito, y allí se reproduce por fisión binaria
dando lugar a formas globosas o irregulares, los
ción, desapareciendo, luego, en el curso de la infec­
ción. '&
' tr<v/
esquizontes tisulares, que contienen gran cantidad �
de merozoítos, elementos más redondeados que los Fase eritrocitaria (Figura 26-4):
esporozoítos, que al cabo de unos días, entre 6 a 14 El trofozoíto. · Es el primer estadio eritrocitario
días, rompen el hepatocito y bajo la· forma de del parásito; se trata de una célula que al presentar
criptozoítos de 2 a 4 µm van a parasitar a los gló- una gran vacuola, da el aspecto de un anillo engar- Figura 26-2. Ciclo evolutivo de P/asmodium falcipan1111 (adaptado de G. Piekarski).

.,1
23-0 PARAS/TOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 231

zado, con el núcleo de color rojo-violáceo con las rojo; se suelen observar los gránulos de Maurer en
coloraciones derivadas del Romanowsky, y el cito­ la superficie de los hematíes.
plasma de color azul. Se suele distinguir el trofozoí­ P, vivax invade de preferencia a eritrocitos jóve­
to joven y el adulto. En el primer caso, es caracte­ nes, y P. malariae suele parasitar los viejos, por lo
rística la fonna anular, y en el segundo, hay una que la parasitemia, en ambas especies, no suele ser
invasión del parásito en todo el parénquima del mayor del 2%; el) cambio P. falcipanim parasita a
hematíe, adoptando una fonna ameboide. Se suele glóbulos rojos de todas las edades, por lo cual las
observar en la superficie de los hematíes parasitados, parasitemias suelen ser mayores al 10% ó más.
granulaciones propias de la especie de plasmodio de
que se trate. El esq11izonte. Es una fonna caracterizada por el
Plasmodium vivax modifica la morfología del aspecto globoso o abultado de la cromatina ( esqui­
glóbulo rojo, el cual se aprecia agrandado y en su zontejoven) para luego dividirse y rodearse de cito­
superficie aparecen las granulaciones llamadas de plasma ( esquizonte maduro). Estas divisiones se
Schüffner. Plasmodium malariae no modifica el ta­ llaman merozoítos, P. vivax suele tener 12 ó más
maño del glóbulo rojo, el parásito toma una fonna en merozoítos distribuidos irregularmente en el hematíe.
banda y en la superficie se suelen observar las P. malariae tiene hasta 8 merozoítos dispuestos,
granulaciones de Ziemann. Plasmodiumfalciparum generalmente en fonna radiada y en la parte central,
Figura 26-3. Plasmodios de la malaria. Ciclo exo-eritrocítico: no modifica el tamaño del glóbulo rojo, y suelen se distingue el pigmento malárico, lo que le da un
fonna de multiplicación esquizogónica en el hígado. (Cor­ verse más de un anillo por cada glóbulo rojo y estos aspecto de roseta o margarita Los esquizontes de P.
tesía del Cr. Dr. H. Short). adoptan· una posición muy superficial al glóbulo falcipanim no se aprecian en- la sangre periférica, Figura 26-5. Pigmento malárico en el SRE del hígado.
puesto que los glóbulos rojos parasitados se adhie­
ren a la superficie interna de los capilares de las
vísceras. Suelen tener hasta más de 16 merozoítos.
El pigmento malárico u homozeína es derivado
del metabolismo de la hemoglobina del glóbulo rojo femenino y laxa en el masculino. Los gametocitos
por el parásito (Figura 26-5). El parásito se nutre de deberán ser ingeridos por los mosquitos en el mo­
la hemoglobina y presenta un metabolismo anaeró­ mento de la succión de sangre, para continuar el
bico, a pesar de ·tener un acceso importante al oxíge­ ciclo evolutivo. Ellos no producen daño y sobrevi­
no que la hemoglobina acarrea. ven en los glóbulos rojos por todo el período de vida
de éstos, es decir 120 días.
El merozoíto. Cuando cada esquizonte maduro Los gametocitos de P. vivax y P. malariae son
se rompe, deja en libertad a los merozoítos. Estos son redondeados y ocupan todo el hematíe; en cambio,
muy pequeños 2-4 µm y abandonan a los esquizon­ los gametocitos de P. falcipanim presentan una for 0

tes maduros para ir a parasitar nuevos eritrocitos, ma de medialuna o de plátano, que los hace incon­
donde dan lugar a los trofozoítos que seguirán el fundibles.
ciclo esquizogónico o eritrocitario. Así concluye el ciclo esquizogónico y de fonna­
El período de la fase eritrocítica y rompimiento de ción de gametocitos, para dar lugar al ciclo sexual o
los esquizontes con la liberación de merozoítos es esporogónico en el Anopheles para continuar con el
diferente para cada especie de Plasmodium; en el ciclo vital del parásito.
caso de P. vivax 48 horas, P. malariae 72 horas y P.
falciparum 48 horas. La ruptura de los esquizontes El vector
maduros significa la ruptura de los glóbulos rojos
parasitados, liberación de proteínasheterólogas, pig­ Los vectores del Plasmodium son mosquitos
mento malárico y restos de membrana de los hematíes. hembras del género Anoplzeles, que son hematófa­
Al parecer, todos ellos o algunos componentes, ac­ gos, pues necesitan sangre para tener los elementos
túan como alergenos capaces de desencadenar el nutritivos necesarios para la maduración de sus hue­
shock anafiláctico que constituye el acceso palúdico vos. El mosquito es un díptero que presenta una
y, además, la -periodicidad de estos ataques nos metamorfosis completa: huevo, larva, pupa y adulto.

-· indican con bastante aproximación la especie in­


volucrada, lo cual es útil para el diagnóstico clínico.
El tiempo de vida de los anofelinos adultos no suele
ser mayor de 45 días.
El nicho ecológico de los anofelinos es un am­
Los gametocitos. Luego de varios ciclos eritro­ biente que tenga depósitos de agua, de preferencia
Figura 26-4. Plasmodios de la malaria. (A) a (H) Plasmodium vivax: (A) Fonnas juveniles y un esquizonte. (8) citarios, algunos merozoítos se convierten en ele­ tranquila, temperatura ambiental y altitud sobre el
Esquizontes. (D, E, F y G) Diversas fonnas esquizogónicas. (H) (Cortesía deLpr. René García V., Stgo, Chile), (1) y mentos sexuados, masculino (microgametocito) y nivel del mar apropiados a cada especie vectora..
(J) Plas111odi11111falciparu111: (1) Fonnas anulares. (J) Gametocito. (K) y (L) Plasmodium malarie: (K)"Fonna esc\íiizos· femenino (macrogametocito), diferenciados por las (Véase el Capítulo 51: Dípteros: 'mosquitos, tábanos ..
gónica en banda. (L) Gametocito. características de la cromatina nuclear, densa en el y moscas).
232 PARASITOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 233

Los huevos. La hembra coloca alrededor de 100 zoófilas. Las primeras son las más-peligrosas corno mecanismos de transmisión: la transfusión sanguí­ sos: Brasil, Perú y Colombia, con cifras cercanas al
huevos por vez y los deja flotando en forma indivi­ transmisores de la malaria. nea que contenga las formas eritrocitarias del pará­ millón de casos al año.
dual, para lo cual poseen flotadores que les permiten Algunas especies se acercan a la vivienda en sito, la transmisión congénita con el pasaje de for­ La ecología de esta infección parasitaria está en
permanecer en la superficie del agua. busca de personas o animales para alimentarse y se mas eritrocitarias a través de la placenta y, en los relación con diversos factores prevalentes en las
les llama endófilas, por contraste, las exófilas pican últimos tiempos, la transmisión por compartir agu­ zonas tropicales. En estas zonas existen colecciones
Las larvas. Son elementos alargados, semejan a campo abierto. Las endófilas son las más peligro­ jas hipodérmicas entre drogadictos infectados y sus­ de agua favorables para la cría de los mosquitos,
gusanos, cuyo tamaño es de aproximadamente 4 a sas y su conducta suele acompañarse del hábito de ceptibles. muchas de ellas son naturales y otras, consecuencia
5 mm de longitud, en los cuales se pueden distin­ chupar la sangre y reposar intradomiciliariamente (en El hombre que vive en la zona rural es el más de labores de ingeniería. Se presentan temperaturas
guir una cabeza y un cuerpo segmentado. Lo más las paredes de la vivienda), lo cual ha sido conside­ afectado, no descartándose la posibilidad de trans­ elevadas que acortan el período de evolución del
llamativo y característico es la ausencia de sifón rado por las campañas de control del vector para misión urbana en circunstancias especiales,. cuando vector y permiten que sea más abundante. Ayudan
respiratorio, que es reemplazado por un aparato rociar con insecticidas residuales las paredes del dentro del perimetro de la ciudad existan extensiones también las viviendas precarias en las zonas rurales
espiracular, por consiguiente las larvas deben aproxi� interior de la vivienda y de este modo aprovechar el de agua, constituyendo un buen ambiente para la que permiten el acceso del mosquito al interior de la
marse a la superficie y adosar todo su cuerpo a la carácter endófilo y antropofilico de las especies presencia de los vectores. vivienda, en especial, aquellos vectores antropófilos
superficie del agua para respirar, lo cual permite vectoras más importantes para el hombre. El hombre que habita viviendas sin protección, y endófilos.
diferenciarlas de las larvas de Cu/ex y Aedes, que es decir, que no tiene instaladas mallas metálicas o La malaria es un parasitismo esencialmente de
tienen sifón respiratorio. Especies de anophelinos vectoras de losPlas1110- duerme sin uso de mosquitero, está predispuesto a áreas rurales y más excepcional es la transmisión
di11111 del hombre. Solamente alrededor de 85 de las la picadura del Anopheles, sobre todo en áreas con urbana, dentro de la cual es más frecuente la trans­
Las pupas. Las larvas, al transformarse en pupas, aproximadamente 400 especies de Anopheles han vectores endófilos y antropofilicos; pues en caso de misión períurbana.
adquieren la forma de una vírgula o coma de 3 a 4 mm sido incriminadas en la transmisión del Plasmodium. vectores exófilos, el hombre que trabaja a campo El tipo de actividad de los residentes de áreas
de longitud, en que la parte ancha y superior corres­ Las más importantes son: abierto y sin protección fisica como repelentes, por endémicas es importante, así, por ejemplo, los culti­
ponde al cefalotórax, donde se puede distinguir dos - A. albimanus: México, El Caribe, América Cen­ ejemplo, es susceptible a contraer la infección. vos de arroz suelen ser sitios favorables para el
sifones respiratorios o trompetas cortas que el insec­ tral, Sudamérica El grupo etario más susceptible es el de los niños, desarrollo del insecto vector.
to adosa a la superficie del agua para respirar. - A. crucians: México, El Caribe, América Cen­ tal vez por estar menos protegidos de las picaduras
tral, Sudamérica y debido a que sus mecanismos defensivos no son PATOLOGIA
Los adultos o imagos. De las pupas salen los - A.freeborni: México lo suficientemente desarrollados corno para hacer
adultos o imagos que miden aproximadamente 1,5 cm - A. pseudopzmctipennis: México, El Caribe, una buena protección. En cuanto al sexo, no hay Fase esquizogónica extraeritrocitaria
de largo y presentan los tres segmentos del cuerpo, América Central, Sudamérica aparente predilección por alguno y ello parece de­
bien diferenciados: cabeza, tórax y abdomen. - A. quadrimaculatus: México, El Caribe pender más de los hábitos de vida de los grupos El esporozoíto inoculado por el Anoplzeles llega
La cabeza presenta los ojos, los palpos maxila­ - A. a/bitarsis: El Caribe, América Central, familiares. por la sangre hasta el hígado, donde se introduce en
res, las antenas, y el aparato chupador. El aparato Sudamérica los hepatocitos, desarrollándose los esquizontes y
chupador presenta los siguientes componentes: el - A. aquasa/is: México, El Caribe, América Cen- EPIDEMIOLOGIA reproduciéndose por fisión binaria, bajo la forma de
labio, las maxilas, las mandíbulas, la hipofaringe y tral, Sudamérica merozoítos. Este desarrollo en el hígado determina
el labro con el tubo alimenticio, todos los cuales, al - A. bel/ator: El Caribe, América Central, La malaria o paludismo humano se considera una hepatomegalia discreta que generalmente nó
ensamblarse, dan lugar al canal de succión que se Sudamérica como una antropozoonosis. La cadena epidemioló­ provoca sintomatología local; sin embargo, en-raras
asemeja a un tubo capilar, de diámetro muy fino, el - A. darlingi: México, El Caribe, América Cen­ gica la constituye el parásito, el vector y el suscep­ ocasiones, hay manifestaciones de insuficiencia he­
cual debe ser lubricado por la saliva del mosquito, tral, Sudamérica tible. El hospedero definitivo es el mosquito vector, pática y sintomatología de un proceso infeccioso
para evitar la coagulación de la sangre succionada. - A. hommunculus: México, El Caribe, América el Anopheles, pues en él se desarrolla la reproduc­ generalizado con fiebre y malestar general.
Las antenas son más plumosos en el macho que en Central, Sudamérica ción sexual del parásito y el hombre es el hospedero
la hembra. - A. oswaldoi: El Caribe, América Central, intermediario, en el cual se realiza la reproducción Fase esquizogónica eritrocitaria
El tórax presenta la inserción de tres pares de Sudamérica asexual.
patas, un par de alas y un par de balancines. Las alas - A. pzmctimacu/a: México, El Caribe, América La forma infectante para el hombre es el esporo­ Ruptura de los glóbulos rojos parasitados. Los
tienen escamas en grupos que le dan el aspecto de Central, Sudamérica zoíto inoculado con la saliva del mosquito. La puerta glóbulos rojos se rompen al final del desarrollo de los
manchas aladas. El abdomen es delgado en reposo - A. vestitipennis: México, El Caribe, América de entrada es la piel y el mecanismo de transmisión esquizontes maduros, cuando son liberados los
y aumenta de volumen a medida que el insecto chupa Central es la picadura del mosquito. Existe la transmisión no. merozoítos; esta circunstancia, adicionada a la pro­
la sangre, su alimento. - A. aztecus: México vectorial: a) por la transfusión sanguínea; b) traspla­ ducción de sustancias extrañas al organismo, deriva­
- A. cnizi: México, América Central, Sudamérica centaria, llamada transmisión congénita; y c) por das de los restos de los hematíes, pigmento malárico
Nicho ecológico de los anophelinos. El ciclo bio­ - A. nuñez-tovari: Sudamérica. compartir agujas hipodérmicas, como en el caso de y productos del metabolismo del parásito, actúan
lógico de los Anopheles o "zancudos" se desarrolla los drogadictos. como pirógenos y producen un shock anafiláctico
en ambientes en que existan aguas tranquilas: El hombre susceptible La infección se distribuye en todos los continen­ que se manifiesta por escalofrío, fiebre y sudoración,
riachuelos, acequias, pantanos, etc. La temperatura tes, siendo en Africa donde cobra más víctimas, lo cual dura algunas horas. En la sangre de estas
ambiental favorable es de 25 a 27 ºC y la distribución especialmente en los niños afectados por P.falcipa­

l
El hombre es el único hospedero intermediario, personas aparecen, en forma transitoria, mediadores
altitudinal, desde la orilla del mar hasta los 2.800 m reservorio de P/asmod/11111 vivax, P. malariae, P. rum, estimándose que alrededor de un millón de activos entre los que se reconoce al factor de necro­
sobre el nivel del mar. falciparum y P. ovale. Adquiere la infección por la niños fallece por este mal. En las Américas, hay sis tumoral (TNF) por su incremento en el paroxismo
Las especies que muestran afinidad por alimen- • picadura del mosquito vector el Anopheles, que .ino­ pocos países que no tienen el parasitismo, pues se de la fiebre. . . . ..,,: ,
tarse sobre el hombre se llaman antropófilas; en cula la forma infeé:tante, el ·esporozoito, a ti;l.vés de extiende desde América del·Norte hasta el Sur; sien­ · Los glóbulos rojos alterados por el parásito, las
cambio, otras lo hacen sobre los animales y se llaman la piel, la puerta de entrada. Sin embargo, hay otros do tres países que aportan el mayor número de ca- sustancias liberadas, principalmente el pigmento

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23-4 PAR,fSITOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 235

carácterprotector, siendo más importante la respuesta Jolly y glóbulos rojos nucleados. Es más común
celular para la protección. observar reticulocitosis después del tratamiento.

:·.-. �- t�
4 .� La infección aguda está caracterizada por el ac­
ceso febril y la inducción de pirógenos endógenos:
Leucocitosis hay al inicio del cuadro, pero, poste­
riormente, es más frecuente la leucopenia y una des­
Ji:. ·i.·. '.. el factor de necrosis tumoral (TNF}, interleucina 4 viación a izquierda de los glóbulos blancos.
A>�
(l.'·•• ,.., (IL-4), interleucina I (IL-1) e interleucina-6 (IL-6), Hemozoina puede observarse en los monocitos. Las
,(' además de una temporal, pero importante disminu­ plaquetas y los factores de la coagulación están
ción en el número de linfocitos T circulantes. Pron­ disminuidos.
tamente, hay una activación policlonal de linfocitos Cuando ocurre la ruptura de la molécula de hemo­
.>:e·�¡�-·�
�::'. T y un alto nivel de receptores de interleucina 2 (IL- globina, el hierro y la globulina son depositados y
.- o 4, • o 2). La activación de los linfocitos T puede liberar reusados. Se debe señalar que no solamente se pro­
citocinas, incluyendo factores de activación de los duce la hemozoína o pigmento malárico, producto de
·O
• •o,r ),:·- macrófagos como gamma interferón (IFN}, el cual la metabolización de la hemoglobina por el parásito,
puede mediar la destrucción de los parásitos. sino que también hay produción de hemosiderina a
partir de los restos de los glóbulos rojos liberados en
Factores hereditarios de la sangre. Los hema­ la ruptura de los esquizontes, y es rápidamente
tíes con deficiencias en glucosa-6 fosfatodehidro­ reusada como fuente de hierro.
genasa y glutationreductasa, o con hemoglobinas Hay una hiperplasia normoblástica con una pro­
de la anemia por células "sickle" o la Thalassemia, liferación mielocítica de la médula ósea. En la etapa
son resistentes a P. falciparum, así como los que no aguda, los vasos están repletos de glóbulos rojos
poseen el antígeno del grupo sanguíneo Duffy, son parasitados y la hemozoína está presente en las cé­
resistentes a Plasmodium vivax. lulas del retículo-endotelio.
b)El bazo: Desde el inicio hay esplenomegalia,
Cambios patológicos en los diversos órganos en con los corpúsculos de Malpighy prominentes. Al
la infección por P.falcipamm (Figura 4-8). Cambios corte histológico, se aprecian los vasos sanguíneos,
patológicos se producen en todas las formas de los cordones de Billroth y sinusoides llenos de gló­
paludismo, pero es en el caso de la infección por P. bulos rojos parasitados. Se puede observar trombo­
falcipamm en que estas manifestaciones se hacen sis de los vasos y hemorragia. Con la mejoría, hay
más evidentes. Según Maegraith, la muerte está aso­ reducción del tamaño del bazo, pero suele persistir
ciada a shock séptico, insuficiencia renal con o sin agrandado. Se ha señalado la ruptura del bazo, lo
hemoglobinuria, diarrea severa, insuficiencia hepáti­ cual puede agravar el curso de la malaria.
Figura 26-6. Malaria por Plasmodium Jalciparum. Secciones de cerebro �umano con capilares repletos de eritrocitos ca (fiebre remitente biliosa) e hiperexia. c) El hígado: Se observa hepatomegalia. Histoló­
parasitados. Cambios en el sistema nervioso central. Los gicamente, se encuentra una congestión de lo sinu:
cambios más importantes ocurren en el mismo cere­ soides y venas centrolobulares debido a la abundan­
bro. Las manifestaciones clínicas son concomitantes cia de glóbulos rojos parasitados. Las células de
malárico, la hemozoína, son captados por las célu­ las vénulas poscapilares, con el concomitante se­ con cefalea, cambios de carácter, fiebre alta, convul­ Küpffer están hipertrofiadas y contienen glóbulos
las del sistema reticuloendotelial, determinando que cuentro de los parásitos en órganos como el cora­ siones y coma. Las alteraciones patológicas obser­ rojos parasitados y no parasitados y hemozoína. Las
órganos ricos en dichas células, como son el hígado zón, cerebro, musculoesquelético e intestino, dando vadas son principalmente de congestión de las células parenquimales no contienen hemozoína. Se
y el bazo, aumenten de tamaño. En el hígado, la altas parasitemias que se asocian a las complicacio­ meninges, presencia de vasos sanguíneos repletos suele observar degeneración y necrosis centro­
hemoglobina procedente de los glóbulos rojos des­ nes del paludismo por P.falciparum, principalmen­ de glóbulos rojos parasitados, infiltración linfocita­ lobular. Concomitantemente con estas lesiones
truidos es metabolizada a hemosiderina (Figura 26- te anemia severa, compromiso cerebral e insufi­ ria perivascular y hemorragias petequiales en la masa histológicas, se encuentran alteraciones de la fun­
5). ciencia renal. gris y blanca. ción hepática.
La destrucción sistemática de los glóbulos rojos La malaria cerebral es una complicación grave Cuando la muerte es debida a la anemia severa, Cambios en el rilión. Los pacientes suelen pre­
determina su disminución, con la consiguiente ane­ del paludismo por P. falcipan1m con tasas de mor­ los tejidos están pálidos. Es probable que la explica­ sentar proteinuria. Los riñones pueden estar aumen­
mia. talidad del 20 al 50%, aparentemente provocado por ción de las lesiones guarden relación con la anoxia tados de tamaño. Al examen histológico hay conges­
La destrucción intravascular de los eritrocitos la disminución de flujo sanguíneo cerebral y una por el bloqueo de la circulación intravascular y la tión de los vasos del riñón con glóbulos rojos
puede causar hemoglobinuria e insuficiencia renal disminución del consumo de oxígeno por el cerebro, hemorragia. parasitados, especialmente en los glomérulos. Se ha
en el caso de la infección por P. falciparum; sin y a encefalopatía cerebral (Figura 26-6). Cambios en el sistema erilropoyético: la médu­ descrito insuficiencia renal con oliguria y uremia,
embargo, la necrosis tubular aguda es probablemen­ la ósea, hígado y bazo: posiblemente debido a una nefritis transitoria. Pre­
te la causa más frecuente de esta insuficiencia renal. Alteraciones inmunológicas en el desarrollo de a)Anemia y médula ósea: La anemia es hemo­ sencia de pigmento malárico se ha descrito en las
la malaria. Durante la evolución de la infección, se lítica, norrnocrómica o hipocrómica, normocítica o a células epiteliales y endoteliales de los glomérulos.
Adherencia de los glóbulos rojos parasitados va desarrollando una respuesta inmunológica en el veces macrocítica, si se asocia una deficiencia de La presencia de cilindros hialinos, epiteliales y gra­
por P. fa/cipamm a los capilares viscerales. Los hombre parasitado. Este mecanismo defensivo es ácido fólico en la dieta, lo que es frecuente en zonas nulares pueden observarse en los túbulos. Focos
glóbulos rojos parasitados po\'1 .1".. falciparum pre­ humoráJ·y celular. •·-·· '· ·· tropicales. El frotís de sangre muestra anisocitosis, hemorrágic9s pueden verse en la corteza y en médu­
sentan en su superficie prolongaciones que favore­ La producción de inmunogfobulinas específicas, poliquilocitosis, policromasia, punteado basófilo ·y la
cen la adherencia de dichas células al endotelio de de la clase lgG e lgM no tienen, necesariamente, en no raras ocasiones, anillos de Cabot, cuerpos de Cambios en el pulmón, el sistema cardiovascu-
236 PARASITOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 237

lar y el tracto gastrointestinal. Ellos pueden mos­ una caída de la presión, aceleración del pulso, cefa­ OIAS 1º 2º 4º
trar modificaciones dependientes básicamente de la lea, náuseas y vómitos. A este período, sigue una
congestión de los vasos, lo que puede llevar a bronco­ sensación de calor que hace descubrirse a la perso­ 40,5º
neumonía o neumonitis,_ a una insuficiencia cardía­ na, comprobándose temperaturas hasta de más de
ca o a una gastroenteritis, especialmente en casos de 40 ºC, el enfermo puede delirar, siente sed intensa,
anemia severa. aceleración de las pulsaciones, lo cual dura corto
tiempo, unos 60 minutos o algo más.
SINTOMATOLOGIA Finalmente, aparece un sudor generalizado y
sensación de alivio, sed, la orina se torna amarilla
Se pueden distinguir las siguientes formas clíni­ cetrina, dejando una sensación de debilidad, de la
cas de presentación de la malaria: que se recupera la persona al poco tiempo. Todo el
acceso puede extenderse de 8 a 12 horas.
Paludismo agudo Cada acceso palúdico ocurre en tiempos varia­
bles, según las especies; así P. vivax produce acce­ TERCIANA BENIGNA
Primoinfección palúdica. Corresponde a las sos cada 48 horas (terciana benigna), P. malariae,
manifestaciones en personas que por primera vez, cada 72 horas (cuartana) y P. falcipanim general-
adquieren la infección y comprende el período pre­ mente cada 48 horas (terciana maligna).
patente, es decir, desde el ingreso del parásito hasta
la aparición de los primeros síntomas y signos de la Paludismo por P.Ja/ciparm11. El hecho de que
enfermedad, que suele ser de 8 a 25 dias. los glóbulos rojos parasitados tiendan a adherirse al
El cuadro clínico es similar al del inicio de otros endotelio de las vénulas poscapilares viscerales,
procesos de infección generalizada: fiebre irregular, determina que a la forma de presentación de los
malestar general, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, accesos palúdicos, se puedan añadir principalmente
todo lo cual lo hace confundir con otros procesos manifestaciones cerebrales, renales, anemia grave y
infecciosos. Después de algunos días, la regularidad otras, por lo que se le denomina, cuando ello ocurre,
de la fiebre va ocurriendo en un determinado momen­ paludismo por P. fa/ciparum grave o complicado,
to del ·día y en forma regular, según sea el Plasmo­ que requiere de un manejo terapéutico apropiado. TERCIANA MALIGNA
dium causante de la infección (Figura 26-7).
Paludismo grave por P.Jalcipar11111. Las mani­
Acceso palúdico. Se caracteriza por escalofríos, festaciones más graves son la anemia (menos del
fiebre y sudoración. En un primer momento, el pa­ 15% de hematócrito, 5 g/dL, y más de 100.000 pará­
ciente siente una sensación de frío intenso que lo sitos/µL), el coma y la insuficiencia renal (excre­
hace tener escalofríos, adopta una posición fetal, ción de oriná, menos de 400 mL por 24 horas en los
castañetea los dientes y solicita abrigo, lo cual no adultos, o 12 mL/kg de peso corporal en niños,
logra aliviarlo. Este periodo dura pocas hora_s, hay creatina sérica superior a 3,0 mg/dL), las que son

TABLA 26-1
COMPARACION DE LAS CARACTERISTICAS DE LAS INFECCIONES MALARICAS PRODUCIDAS POR
PLASMODIUM VIVAX, P. FALC/PARUM, Y P. MALARIAE (Adaptado de L.G. Bruce-Chwatt). CUARTANA

Plasmadi11111 viva., P. falcipan1111 P. malariae Figura 26-7. Curvas febriles de la malaria en relación con el ciclo esquizogónico de los plasmodios.
Duración del ciclo preeritrocítico 6a 8 días 5 1/2a 7días 12a 16días
Periodo prepatente 11a 23días 9 a 10días 15 a 16dias consecuencia de la destrucción de los glóbulos rojos rrir con hemólisis severa. La anemia es normocítica
Periodo de incubación 12a 17días 9 a 14días 18 a 40días y de la alteración en la circulación cerebral y renal, normocrómica, con leucopenia y trombocitopenia,
Ciclo esquizogónico en los hematíes 48 horas 48 horas (irregular) 72horas además de la precipitación de complejos antígeno­ hay hiponatremia. Hay elevación de las transamina-
anticuerpo en los glomérulos renales. . sas, y durante el embarazo, la caída de la glicemia
Parasitemia (promedio mm3) 20mil 20a 500mil 6mil
Otros indicadores del cuadro grave son: edema es especialmente importante.
Gravedad del ataque primario Benigno Grave en los no inmunes Benigno pulmonar, hipoglicemia (menor de 40 mg/dL), co­
Duración de la crisis febril (en horas) 8 a 12 16a 36 8 a 10 lapso o choque circulatorio, hemorragias espontá­ Paludismo crónico
Recurrencias (cantidad) �edianas Nulas o escasas Abundantes neas, convulsiones generalizadas repetidas, acido-
Lapsos entre i.ma· y otra
_, -sis, hemoglobinuria mácroscópica. - Es más raro de observar en el momento presen­
·· üirgos Cortos Muy largos
Al examen fisico muchós pacientes tienen hepa­ te, debido principalmente al diagnóstico y trata·
Duración de la infección (en años) 2a 3 1a 2 3a 50

\
toesplenomegalia dolorosa; la ictericia puede ocu- miento oportuno de los casos; sin embargo, en
238 e PARAS/TOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 239

algunas personas, la sintomatología de la primoin­ Paludismo mixto suero sanguíneo y examinar la porción de glóbulos nadas es evidente, artemisinina, mefloquina y halo­
fección palúdica y del período agudo puede pasar de la misma interfase (Takami). fantrina.
desapercibida o confundida con otros procesos, pues Es frecuente observar infecciones mixtas, con El uso de pruebas serológicas para detectar an­ El tratamiento del paludismo está dirigido a eli­
la respuesta inmunitaria de los pacientes es capaz más de una especie de Plasmodium en un mismo ticuerpos, clase IgG o IgM, ha demostrado ser útil minar la fase eritrocítica, causante de la mayor parte
de reducir la parasitemia y las lesiones orgánicas. paciente, dependiendo de la zona geográfica, siendo en estudios de carácter epidemiólogico, pero tiene de la sintomatología. La droga recomendada es la
Las personas afectadas de paludismo crónico pre­ más común en Africa. La respuesta y protección escaso rendimiento en el discernimiento clínico de cloroquina, y para eliminar la fase exoeritrocitaria
sentan compromiso del estado general, incluyendo ir¡munológica es muy específica para cada especie. los casos; sin embargo, la producción de anticuer­ (P. vivax y P. malariae) la primaquina, la cual
baja de peso, fiebre irregular, hepatoesplenomega­ La sintomatología depende de las especies pos monoclonales contra fracciones antigénicas del también posee una acción gametocítica.
lia, anemia, que la hace propensa a infecciones involucradas, el grado de protección inmunológica P. falcipanun, ha permitido la elaboración de mé­ En los ·últimos años se ha extendido en muchos
,¡ ·
1'
intercurrentes que pueden agravar los síntomas y de cada especie, el tiempo de la infección, los cam­ todos para detectarlos en forma simple en una tira lugares del mundo, la resistencia de P.falciparum

I¡:
aun llevar al deceso. bios fisiológicos que se producen, incluyendo la de papel. Consiste en humedecer con sangre una a la cloroquina, por lo cual se ha recomendado usar,
Una fonna de paludismo crónico asintomático producción de citocinas. tira de papel impregnada con la muestra de sangre en esas circunstancias, la combinación pirimetami­ '¡:
es el que presentan los portadores. sospechosa de P.falcipan1m, la cual tiene colocada na-sulfadoxina y primaquina como gametocida.
DIAGNOSTICO en forma de banda, un anticuerpo monoclonal con­ En América Latina ya se ha detectado resisten­ ¡;
Portador. Existe un número de personas que por !i
tra una fracción antigénica del parásito (la fracción cia a la combinación piremetamina-sulfadoxina, por
causa de una buena respuesta inmunitaria, suelen La sospecha diagnóstica se plantea en casos rica en histidina correspondiente al parásito), se lo cual se aconseja en su lugar, el uso de quinina li
eliminar o reducir el parásito en su fase eritrocitaria, febriles. En ocasiones, accesos de escalofríos, fiebre adiciona un set revelador que permite que se desa­ oral, asociada a tetraciclina, en adultos y clinda­

\\:
pero persistiendo las fonnas exoeritrocitarias (hip­ y sudor de personas que vivan o hayan visitado, por rrolle un color cuando hay P. falciparum en la micina en niños. La situación más dificil de tratar
nozoítos) por muchos años, en el caso de P. mala­ lo menos dos semanas antes, áreas endémicas, ha­ muestra. se presenta en pacientes de P.falciparum complica­
riae puede llegar hasta diez y en P. vivax hasta tres. yan recibido una transfusión sanguínea o recién El diagnóstico diferencial debe hacerse con todo dos, en los cuales debe administrarse al inicio qui­ ¡1
1
Estas personas portadoras son la causa de la persis­ nacidos febriles con baja de peso al nacer y hepatoes­ síndrome infeccioso que cursa con fiebre alta o con nina parenteral las primeras 24 ó 48 horas y luego·

-11
tencia del paludismo en áreas bajo control o en la plenomegalia provenientes de gestantes en quienes cuadros similares a un acceso palúdico como son las oral, asociado a antibióticos, tetraciclina, clinda­
transmisión no vectorial de la malaria, como son las se diagnosticó paludismo. infecciones generalizadas como fiebre tifoidea, bru­ micina o doxiciclina. Aún hay áreas de América,
transfusiones y los casos congénitos. La confirmación diagnóstica se hace por el ha­ cellosis, tuberculosis, procesos focales, respirato­ similar a lo que ocurre en otras áreas del mundo, en
llazgo del parásito en la sangre, ya sea demostrado rios, de las vías aéreas altas, pielitis, pielonefritis, que la resistencia a la quinina se ha hecho presente, 1!1
Paludis�oy embarazo directamente o a través de pruebas indirectas. etcétera. por lo cual las drogas como las obtenidas de la I!
¡i
El método más sencillo de diagnóstico es el frotis Los cuadros cerebrales de P.fa/ciparum suelen planta usada tradicionalmente en China como ;,
Se ha señalado parasitemias elevadas en ges­ y la gota gruesa, tornados preferentemente durante confundirse con meningitis o meningoencefalitis de antipalúdica, el quinghasu (como, por ejemplo, las J.i
tantes y especialmente en primíparas, en el tercer el acceso febril y coloreados con derivados del diversas etiologías (meningococosis, meningitis tu­ artemisininas), han demostrado ser útiles en estos
trimestre del embarazo, lo que guardaría relación con Romanowsky, siendo la coloración de Giernsa las berculosa, etc.), y los renales, con glomerulonefritis casos, así como la mefloquina y la halofantrina.
la atenuación de la respuesta inmunitaria durante la más usada. Este método puede emplearse en postas . aguda, entre otros. Los esquemas de tratamiento se· establecen en
gestación. El aborto y el parto prematuro suele estar o establecimientos de salud locales que cuenten con cada país, región o localidad de acuerdo con las
relacionado con los accesos palúdicos. La placenta microscopio. El diagnóstico deber ser precoz para la TRATAMIENTO características de la malaria en esa zona geográfica:
generalmente contiene vasos congestivos con gló­ instauración del tratamiento lo más pronto que sea especie causante, paludismo por P.falcipan1m, pre­
bulos rojos parasitados, lo cual puede alterar la posible, en especial, para el caso del paludismo por Las drogas que se usan dependen de la zona sencia de resistencia del Plas111odi11111 a los anti­
nutrición del feto y ser una causa de la muerte fetal P.falciparum. geográfica en la que se ha adquirido la infección, la maláricos, y tratamiento de niños, gestantes o adul­
o aborto; estas alteraciones son notorias en el lado Dado que el examen de una lámina de frotis y especie de Plasmadium involucyada, y la forma clí­ tos.
maternal de la placenta, pues en su lado fetal no se gota gruesa demanda tiempo para su examen, y a que nica de paludismo. La zona geográfica de proceden­ En todo caso, las directivas para el tratamiento
observan parásitos ni pigmento. Esta circunstancia es necesaria una concentración mínima de los pará­ cia del paciente nos indicaría, a priori, las drogas deben estar dadas por los organismos responsables
ha dado origen a formular la hipótesis de un especial sitos en sangre para ser detectados, ha detenninado que se consideran útiles en dichas regiones, en base del control de la malaria en la zona y ellas deben ser
mecanismo de adhesión de los glóbulos rojos pa­ que se hayan 'ideado métodos que mejoren el diag­ al problema de resistencia a los antipalúdicos. La seguidas, y evitar así el uso indiscriminado de anti­
rasitados a los vasos de la placenta, antes que un nóstico; asi, por ejemplo, se ha recomendado el uso especie de Plas111odil1111 es importante, pues si es el rnaláricos, lo que puede ocasionar complicaciones
mecanismo inmunológico. de naranja de acridina, que "tiñe" el núcleo para P. fa/ciparum el involucrado, debe considerarse la en el manejo terapéutico de los casos.
detectar mejor a los parásitos, bajo el microscopio de posibilidad de las complicaciones y prevenirlas ha­ Un ejemplo de directivas del tratamiento es el
Paludismo y transfusión sanguínea fluorescencia, tanto directamente en la lámina prepa­ ciendo los exámenes adicionales si el caso es grave dado por el Programa de Control de la Malaria en el
rada de la sangre del dedo o usando un método de o complicado. La forma clínica es de trascendencia Perú, donde predomina la presencia de P. viva.,,
El plasmodio puede sobrevivir hasta dos sema­ concentración, como es el colectar la sangre en un pues la forma aguda, crónica o complicada, así corno aunque en los últimos años se ha reintroducido P
nas en las sangres en refrigeración. Los niños y tubo capilar que contiene naranja de acridina, el cual la gestante infectada o el que ha adquirido la infec­ falciparum, con el agravante de habérsele encontra­
adolescentes transfundidos suelen ser los que desa­ se centrifuga y en la zona de sedimentación de los ción por transfusión, requieren una conducta tera­ do resistente a cloroquina en alto porcentaje y tam­
rrollan formas más severas de malaria que los adul­ glóbulos blancos se ubican los parásitos, los que péutica apropiada. bién a Fansidar.
tos. En estos casos, son las formas eritrocitarias las pueden ser detectados en el microscopio de fluores­ Los medicamentos antipalúdicos se suelen cla­
que son transfundidas, por lo cual estas personas no cencia (Método de Q B C). Aun sin usar el colorante, sificar en aquellos de primera línea: cloroquina y Tratamiento de la malaria
tendrán ciclo exoeritrocitario o hepático, lo que hay se puede emplear un tubo capilar, tipo hematocrito, primaquina, entre los más importantes. De segunda por Plasmodi11m vivax
que considerar al hacer el tratamiento de estos ca­ de plástico, centrifugar y luego cortar el tubo en la línea: combinación de pirimetamina y sulfa, qui­
sos. zona próxima a la interfase entre los glóbulos y el nina, antibióticos como la tetraciclina y clindami­ Adultos: días 1 y 2: 4 tabletas de cloroquina + 1
cina; y en zonas donde la resistencia a los mencio- tableta de primaquina por día
PARASITOLOGIA MEDICA MALARIA O PALUDISMO 241

día 3: 2 tabletas de cloroquina + 1 PREVENCION BIBLIOGRAFIA Práctica del Paludismo. Serie de Informes Técnicos.
tableta de primaquina 1990; 805. OMS.
día 4 al 14: 1 tableta de primaquina diaria La malaria o paludismo es una infección para­ Agriculture Research Service. U.S. Department of Agri­ Luzzi GA. Peto TEA. Adverse effects of antimalarials.
Niños: días 1 y 2: I O mg cloroquina base/kg + sitaria tal vez tan antigua como la presencia del culture. Mosquitoes of Medica) Importance. Agri­ An Update. Drug Safely 1993; 8:295-311.
0,25 mg de primaquina/kg hombre sobre la tierra. Hasta que no se descubrió el culture Hanbook Nº 152. 1959. Programa de enfermedades transmisibles. OPS. Estratifi­
por día. agente causal y su ciclo de vida, fue imposible algu­ Eddinton GM, Gilles HM. Protozoal Diseases. Pathology cación epidemiológica de la malaria en la Región de las
5 mg cloroquina/base/kg + ,na medida racional para evitarla; sin embargo, las in the Tropics. Chapter 2. Williams and Wilkins Co, Américas. Bol Epidemiológico OPS 1991; 12 (4).
día 3:
poblaciones identificaron los lugares en _que se ad­ 1969. White NJ. The treatment of malaria. N Eng J Med 1996; :l
0,25 mg primaquina/kg
día 4 al 14: 0,25 mg primaquina/kg diario. quiría la infección, pudiéndola distinguir de otros Informe dé un grupo científico de laOMS. Quimioterapia 335: 800-6.
procesos. De allí que en China, se descubriera al
Tratamiento de la malaria quinshasu y en la época precolombina, en el Perú,
por Plas111odi11111 Jalciparum a la quina como plantas que usadas en diversas
formas, permitían aliviar y curar casos de paludis­
Adultos: días 1 y 2: 4 tabletas de cloroquina dia­ mo; a su vez, el descubrimiento del Anopheles como
rias. vector y su importancia fundamental en la transmi­
día 3: 2 tabletas de cloroquina + 3 sión de la infección, ha hecho que la lucha contra
tabletas de primaquina él, sea el principal objeto de campañas de control y
erradicación de la infección; sin embargo, sigue
Niños: días 1 y 2: 1 O mg cloroquina base/kg dia- siendo la malaria una de las principales infecciones
rio. metaxénicas en el mundo y algunos países de Amé­
día 3: 5 mg cloroquina base/kg+O.75 rica Latina.
mg primaquina/kg Se suele distinguir dos formas de prevención: la
individual y la colectiva.
Tratamiento de la malaria por
P.Jalcipar11111 resistente a la cloroquina Prevención individual. Consiste en la protección
de la picadura del mosquito transmisor, que suele ser
Adultos: día 1: 3 tabletas de sulfadoxina-pi­ de hábito intradomiciliario, mediante el uso de mallas
rimetamina + 3 tabletas de en puertas y ventanas, así como dormir bajo mosqui­
primaquina teros, impregnados con insecticidas. Para personas
que permanecerán temporalmente en el área endémi­
Niños: día 1 : 25 mg de sulfadoxina/kg+1,25 ca se debe usar quimioprofilácticos, aconsejándose
mg/kgde pirimetamina+0,75 cloroquina y proguanil; y en regiones de resistencia
mg de primaquina/kg a la cloroquina; se recomienda las combinaciones de
Nota: No se administrará primaquina en gestantes. piremetamina-dapsona, aunque la posibilidad de
agranulocitosis debe tenerse en cuenta, así como
Tratamiento de la malaria por P.Jalcipar11111 con la combinación pirimetamina-sulfodoxina o
resistente a sulfadoxina + pirimetamina amodiaquina que causan reacciones adversas y re­
cientemente se ha introducido el uso de la mefloquina,
Adultos y niños mayores de 8 años: aunque puede haber reacciones neurosiquiátricas.
días 1 al 7: mañana: 2 tabletas de quinina+ 2 cáp­ Ellas deben tomarse dos semanas antes de ingresar
sulas de tetraciclina al territorio y hasta cuatro a seis semanas después
tarde: 2 tabletas de quinina de abandonarlo.
noche: 2 tabletas de quinina+ 2 cáp­
sulas de tetraciclina Prevención colectiva. Se inserta en la mayoría de
los casos en programas de control desarrollados por
ii
Gestantes y niños menores de 8 años: los países con malaria como problema de salud y con • ·I
días I y 2: mañana: 10 mg de quinina/kg repercusión en la economía del país. Las recomenda­
tarde: 1 O mg de quinina/kg ciones señalan: hacer el diagnóstico y el tratamiento ,
precoz de los casos de paludismo, así como las in­ 1 ;

I'¡: :
noche: 1O mg de quinina/kg ¡
tervenciones antivectoriales que incluyen el uso
días 3 al 7: mañana: 1O mg de quinina/kg+10 mg racional de insecticidas, labores de ingeniería sani­ 1

de clindamicina/kg taria y la participación activa de las comunidades en


tarde: 1O mg de quinina/kg las acciones de control.
noche: !0 mg de quinina/kg+ 10 mg
de clindamicina/kg. I'
r
¡.
¡
t
Capítulo 27 LEISHMAN/OSIS 243

LEISHMANIOSIS Amastigotos

ALEJANDRO LLANOS y CESAR NAQUIRA


TEJIDOS

Amastigotos
(d)
Definición. Histoparasitosis producida por pro­ El parásito presenta dos estadios en su ciclo
P�om¡¡stigotos
tozoos del género Leislz111ania, de localización intra­ evolutivo:
celular (macrófagos), caracterizada por lesiones cu­ a) El amastigoto, de forma ovoidea o esférica, de
táneas, mucosas o viscerales y transmitida por la 2 a 5 µm de diámetro, núcleo redondo, quinetoplasto
HOMBRE Y OTROS MAMIFEROS
· picadura de insectos dípteros de la familia Plile­ en forma de bastón y sin flagelo libre; es la forma PICADURA (a)
PICADURA
botomidae, géneros Phlebatamus y Lutza111yia. Exis­ intracelular del parásito (Figura 27-1), y
ten reservorios domésticos y silvestres, por lo que b) El promastigoto, de fonna fusifonne de 14 a 20 LUTZOMYIA / PHLEBOTOI'rfUS
puede considerársela como una zoonosis. µm de largo por 2 a 4 de ancho. Esta forma se encuen­ Primiiistigótos
(e)
tra en el tubo digestivo del vector y en los cultivos 'metii�ícÍiéós .•
Biología in vitra.
Faringe
El género Leishmania está constituido por diver­ Epidemiología
sas especies y subespecies de protozoos flagelados,
cuyo ciclo biológico heteroxénico transcurre en el El género Leishmania involucra a numerosas
intestino de los insectos vectores y en los tejidos de especies y subespecies, de las cuales 15 afectan al
un hospedero vertebrado. hombre, 1O de ellas en el Nuevo Mundo y 5 en el
La morfología de las diferentes especies del gé­ Viejo Mundo (Tabla 27-1).
nero Leishmania es muy similar. De allí que la taxo­ Los humanos son hospederos accidentales, cuan­ Prom�stigotos (b)
nomía se basa en múltiples características; las más do por sus actividades se ponen en contacto t,n el
relevantes son: ciclo primario de transmisión animal-vector (zoo-
a) Bioquímicas: mediante el estudio de las iso­ Figura 27-2. Ciclo evolutivo de leishmania. Los mosquitos de los géneros Phlebotomus (en el Viejo Mundo) y
enzimas (zimodemas); lutzomyia ten el Nuevo Mundo), se infectan al ingerir sangre con nlacrófagos o leucocitos infectados con umusligolos
b) Inmunobiológicas: mediante el uso de anti­ (a). En el intestino medio del mosquito, los amastigotos se transfonnan en promastigotos, los cuales se multiplican ··
cuerpos monoclonales específicos (serodemas) para TABLA27-I profusamente por fisión binaria (b). A los ocho días, los promastigotos migran hacia la faringe y pueden ser inoculados
las subespecies y la hibridización del ADN del qui­ ESPECIES Y SUBESPECIES DE LE/SHMANIA DE en la próxima picadura a los hospederos susceptibles (c). En el mamífero, los promastigotos penetran al interior de las
netoplasto (esquizodemas); IMPORTANCIA PARA EL HOMBRE células del SRE, transfonnándose en amastigoios (d) los que, in situ o diseminándose por diversos tejidos según las
c) Comportamiento biológico de la Leish111a11ia: especies de Leishmania, continúan multiplicándose por fisión binaria y son las fonnas infectantes para los mosquitos (e).
ya sea en animales de experimentación, el vector, o NUEVO MUNDO
en los medios de cultivo in vitra.
Subgénero Via1111ia Subgénero leish111a11ia
nosis). Existen excepciones.como en la leishmaniosis por ello que pican a los hombres o animales (Figura
Complejo brasiliensis; Complejo do11ova11i: visceral de la India, en donde el ciclo primario de 27-2). Aquellas hembras infectadas transmiten la
Leishmania braziliensis Leishmania clragasi transmisión ocurre entre humano-vector-humano enfermedad cuando inoculan los promastigotos al
(antropozoonosis). Por lo general, pocas especies de picar a los hospederos susceptibles. En los mamífe­
Leislunania guayanensis Complejo mexicana:
flebótomos vectores y de hospederos vertebrados ros, los promastigotos entran a los monocitos o ma­
leishmania paramensis Lei'shmania mexicana mantienen los ciclos de transmisión. Usualmente, crófagos a través de receptores .específicos, en don­
Leishmania peruviana leishmania amazonensis hay un hospedero reservorio primario y una especie de se transforman en amastigotos, los que se mul­
leishmania lainsonai leishmania pifanoi de flebótomo vector por cada especie de Leishmania tiplican sólo en el interior de estas células del sis­
Leishmania venezuelense en un foco. Para una misma especie, tanto los vecto­ tema reticuloendotelial (parásitos intracelulares obli­
res como los reservorios pueden variar según los gados). Los vectores se infectan cuando ingieren
VIEJO MUNDO focos. sangre con macrófagos infectados con amastigotos
Subgénero leishmania Los vectores son mosquitos hematófagos de los de un hospedero. En el intestino del mosquito, los
géneros Phlebotomus en el Viejo Mundo y Lutza­ amastigotos se transforman en promastigotos, los
leishmania tropica Complejo donovani: cuales se dividen profusamente por fisión binaria.
myia en el Nuevo Mundo, en donde existen más de
Leishmania majar Lei�f11�,ania donovani 350 especies de flebótomos, de los cuales 88 son La forma clínica de la enfermedad dependerá de las
Figura 27-J. leishmanias en corte histológico de una Leishmania aethiopica Leish�11a11ia infantum vectores potenciales (Tabla 27-2). Los flebótomos caracteristicas biológicas de especie o subespecie de
leishmaniosis tegumentaria. hembras requieren sangre para su reproducción; es Leishmania, pero la localización de las lesiones

:1'
244� PARASITOLOGIA MEDICA LEISHMANIOSIS 245

TABLA27-2 cios porta. En la médula ósea hay presencia de pueden realizar fos siguientes procedimientos para
PRJNCIPALES VECTORES Y RESERVORJOS amastigotos intracelulares y depresión de la serie la demostración del parásito:
roja y. blanca. Los ganglios mesentéricos son los P11nción de médula, ganglios linfáticos, bazo e
DE LAS ESPECIES DE LEISHMANJA DE IMPORTANCIA CLINICA
más comprometidos. Otros órganos, como los riño­ hígado. Es más factible realizar la punción de médu­
Especies Vector Reservorio nes y pulmones, también pueden alterarse. La piel la ósea y buscar a los amastigotos de Leishmania en
Distribución geográfica
suele presentar nódulos, ulceraciones hiperpigmen­ el interior de los histiocitos (coloración de Giemsa o
VIEJO MUNDO tación o despigmentaciones. anticuerpos monoclonales). La punción esplénica es
L. donova11i P. argentipes Hwnanos Asia
el método más sensible (> 95%}, pero sólo se debe
P. orienta/is Roedores, caninos
Sintomatología. En las áreas endémicas, la ma­ realizar por un clínico entrenado, y cuando el pa­
Africa
L. infantum P. perniciosus, P. ariasi yor parte de las personas infectadas no presenta ciente tenga un tiempo de protrombina nonnal y
L. major síntomas (varia entre 30-100%). El período de incu­ plaquetas superiores a 40. 000 mm3•
P. papatasi Roedores Mediterráneo, Norte de Africa, Asia bación promedio es de 2-4 meses (rango entre 3 C11ltivos in vitro e inoc11laciones en animales de
L. tropica P. sergenti Roedores Mediterráneo, Asia semanas a más de 2 años). Existe un espectro en las experi11lfntación. Con el material obtenido de las
L. aethiopica P. longipes, P. pedifer Roedores Etiopía, Kenya manifestaciones clínicas de LV. La enfermedad clá­ puncio�es o biopsias, es posible cultivar el parásito
sica se caracteriza por: fiebre crónica, adelgaza­ en medios apropiados como el NNN o inocular en
NUEVO MUNDO miento, hepatoesplenomegalia (a predominio de animalés susceptibles, como el ratón, la rata y, en
L. chagasi Lu. lomgipalpis Zorros, perros Brasil, Norte de América del Sur, esplenomegalia), pancitopenia (anemia, hemorra­ especial, los hámsters.
Marsupiales Américá Central, gias, infecciones intercurrentes) y hipergammaglo­ Para el diagnóstico inmunológico se pueden
L. mexicana Lu. o/meca Roedores Yucatán, Guatemala, Belize.
bulinemia. Las formas incompletas pueden carecer emplear:
L. brazi/iensis Psy. wellcomi de una o más de estas manifestaciones. En las áreas Pn,ebas serológicas. Han resultado muy útiles
L. guyanensis
Roedores América del Sur y Central
i endémicas, algunos individuos pueden desarrollar en LV la aglutinación directa (sensibilidad 97-100%
¡:
Lu. umbrati/is Mamíferos América del Sur
L. peruviana Lu. peruensis, enfermedad oligosintomática, caracterizada por tos, con una especificidad 70%), la inmunofluorescencia
Roedores Perú
·O diarrea, fiebre baja o leve, ausencia de visceromega­ indirecta y la prueba de ELISA y DOT-ELISA (sen­
Lu. verrocarum
lia y no suben de peso. Generalmente, estos indivi­ s.ibilidad 95-100% con una especificidad 99%).
L. panamensis Lu. trapidoi Mamíferos América Central, norte de Jntradermorreacción (leislzmanina). Tiene utili­
duos no desarrollan la forma clásica de LV y se
América del Sur recuperan espontáneamente. dad en el estadio subagudo y crónico; los pacientes
L. amazOnensis Lu. jlaviscuté(lata Roedores América del Sur Al inicio, la enfermedad puede ser insidiosa, rara con la forma clásica, particulannente los graves,
vez brusca, Ptedominando la fiebre de curso varia­ suelen tener esta prueba negativa por el estadio de
do, para aparecer posteriormente, signos generales y anergia en que se encuentran.
viscerales como las hemorragias nasales, gingivales
cutáneas dependerá, principalmente, de las caracte­ la costa Mediterránea, la LV está en incremento rela­ o intestinales, así como la hepatoesplenomegalia, Tratamiento. Las sales de antimonio pentava­
rísticas de comportamiento del vector y del hospe­ cionado con el aumento del SIDA En las Américas, la :,) micropoliadenopatía y edema en miembros inferio­ lentes son las drogas de elección. En el Nuevo Mun-
dero. leislunaniosis visceral se presenta desde el sur de los res. En ocasiones, hay molestias digestivas: vómitos, do se usa más la N-metilglucamina (Glucantime®) y·
Los reservarlos primarios usualmente son mamí­ Estados Unidos de América hasta el norte de Argen­ dolores epigástricos, pérdida del apetito, lo que lle­ en el Viejo Mundo el estibogluconato de sodio (Pen­
feros silvestres, los que generalmente no muestran tina, ocurriendo la mayor incidencia en el Noreste de va al adelgazamient.o y debilitamjento general. En tostam®). Medicamentos de segunda línea son la
signos evidentes de la infección y los amastigotos, Brasil. En Ecuador, Peru, Chile y Uruguay no se han los niños, hay retardo del crecimiento. En la etapa anfotericina B (incluyendo la presentación liposo­
presentes en la piel o las vísceras, son escasos. Los reportado casos autóctonos de LV. Los factores de final y severa de la enfermedad, al mal estado gene­ mal), aminosidina y pentainidina, los que se deben
mamíferos domésticos, frecuentemente, son reser­ riesgo para esta enfermedad son la desnutrición (por ral y a la disminución de las defensas, se agregan las usar cuando exista falla terapéutica a los antimoniales
varlos secundarios. lo que los niños son el grupo más afectado) y la infecciones intercurrentes (tuberculosis, neumonía, o cainfección con VIH. (Véase el Capítulo 66: Trata­
Las especies de Leishmania que infectan al hom­ presencia de perros infectados en las zonas rurales. disentería, sarampión) que puede agravar el proceso miento de las parasitosis y tablas terapéuticas).
bre, pueden manifestarse en tres formas clínicas di­ Animales salvajes como el zorro y la zarigüeya pueden y llevar a la muerte.
ferentes: cutánea, mucocutánea y visceral. mantener y propagar esta zoonosis. Lutzomyia Los signos cutáneos más frecuentes son la apari­ Pronóstico. La mortalidad de LV en la fonna clá­
longipalpis es el vector más importante. El agente ción de nódulos subcutáneos, ulceraciones de la piel sica puede ser alta (85-90%), pero con tratamiento
Leishmaniosis visceral etiológico es Leislzmania clzagasi. y cambios de color. A la palidez por la anemia, se adecuado es menor al 5%. La desnutrición, depre­
agregan áreas de pigmentación o a veces, de des­ sión de la inmunidad celular (neoplasia, tratamiento
Se denomina también kalazar (en sánscrito signi­ Patología. En la lesión de puerta de entrada del pigmentación. En dichas lesiones se pueden encon­ con corticoides, etc.), y la coinfección con el virus de
fica "enfermedad negra") y sus agentes causales parásito, hay histiocitos con amastigotos en su in­ trar los parásitos. VIH son factores que incrementan la mortalidad.
son: L. donovani que predomina en el subcontinente terior y los ganglios regionales suelen estar aumen­ Cuando los pacientes se curan, usualmente no desa­
Indiano, China, Africa e Irak; L. infantum, predomi­ tados de tamaño y con parásitos. Los órganos abun­ Diagnóstico. En el diagnóstico diferencial de­ rrollan secuelas y la leishmanina se toma positiva.
nante en la Costa del Mediterráneo Europeo y Afri­ dantes en reticuloendotelio como el bazo, el hígado, ben incluirse entidades como malaria, cuadros ·que Aproximadamente, el 20% de los pacientes en la
cano, y L. clzagasi, causante de la leislunaniosis médula ósea, ganglios linfáticos, etc. , se encuentran produzcan hepatoesplenomegalia o virosis. India y 5% en el Africa desarrollan leishmaniosis
· . visceral en las Américas. afectados. El hemograma revela anemia normocítica, nor­ dérmica poskalazar.
El bazo aumenta considerablemente de tamaño; mocrónica, leucopenia con neutropenia y trombo­
Epidemiología. Más del 90% de los casos de es nodular y en los casos crónicos; hay fibrosis; La citopenia. · Control. Las medidas de control son múltiples
leislunaniosis visceral (LV) a nivel mundial, son re­ hepatomegalia se debe a la hiperplasia reticuloen­ El diagnóstico parasirológico tendrá mayores li­ y deberían ser integradas. Incluye acciones de diag­
portados en la India, Bangladesh, Nepal y Sudán. En dotelial y el infiltrado linfomonocitario de los espa- mitaciones en los pacientes con oligoparasitosis. Se nóstico y eliminación de los perros infectados, com-

1

l
1

i
246 PARASITOLOGIA MEDICA LEISHMANIOSIS 247

bate contra los vectores, mediante la aplicación de los hábitos de los vectores para la implementación
insecticidas de acción residual, diagnóstico y trata­ de medidas de control y prevención de este parasi­
miento precoz de las personas infectadas (en Africa tismo. (Véase el Capítulo 51: Dípteros: mosquitos,
y la India tratamiento de los pacientes que desarro­ tábanos y moscas).
llan leishmaniosis dérmica poskalazar). Las acciones La transmisión depende del contacto hombre­
de control implican, también, actividades educativas vector. El patrón de transmisión depende de donde
y la participación comunitaria. ocurre la picadura y puede ser : a) intradomiciliario,
cuando el vector entra a las casas de las personas; b)
LEISHMANIOSIS TEGUMENTARIA peridomiciliario, cuando el contacto hombre-vec.­
tor ocurre alrededor del domicilio; y c) rural, en
En América Latina la leishmaniosis dérmica ha donde las personas se exponen a la picadura del
sido conocida desde muy antiguo. En la época incaica, vector al internarse en el bosque o realizar activida­
el término quechua uta ("roer") se usó para designar des (usualmente agrícolas) en Jugares donde se en­
las formas cutáneas de la enfermedad. Los ceramistas cuentran los reservorios y vectores del parásito (foco
del antiguo Perú representaron las lesiones de leish­ de transmisión). Tanto en la transmisión intra como
maniosis en sus "huacos antropomórficos". peridomiciliaria, ambos sexos son afectados en pro­
porciones similares (sin embargo, cuando la trans­
Leishmaniosis tegumentaria americana misión es básicamente intradomiciliaria, los niños
menores de cuatro años son los más afectados); en
La enfermedad tegumentaria en las Américas tanto en la transmisión rural, los adultos y en espe­
puede manifestarse de tres formas clínicas diferen­ cial los varones, son los afectados.
tes: cutánea, mucocutánea y cutánea diji1sa. Los reservorios naturales del parásito lo consti­
tuyen los vertebrados silvestres (prinqipalmente roe­
Epidemiología. La leishmaniosis se presenta des­ dores); los animales domésticos tienen un rol menor
de el sur de los Estados Unidos hasta el norte de (reservorios secundarios). Los animales naturalmen-
Argentina. Se encuentran libres de transmisión Ca­ te infectados suelen no presentar lesiones evidentes
nadá, <:::hile, Uruguay y la mayoría de las islas1 del en la piel, siendo necesario las biopsias y los cultivos
Caribe. La distribución y la epidemiología de la de ellas para la demostración parasitglógica.
enfermedad está relacionada con diferentes condi­ Todas las leishmanias de importancia médica
ciones ecológicas y socioeconómicas. Así, tenemos producen lesiones cutáneas y algunas de ellas tienen
leishmaniosis en las zonas andinas de Perú y Ecua­ la capacidad de producir lesiones mucosas. La
dor (en donde la transmisión guarda relación con la subespecie más importante es Leishmania (Viannia)
distribución altitudinal del vector, que oscila entre braziliensis (ver Tabla 27-1).
los 700 a 3.000 m sobre el nivel del mar); zonas
montañosas con características tropicales de Co­ Patología. Las lesiones cutáneas y mucosas pre­
lombia, Ecuador, Perú, Bolivia y la mayoría de los sentan modificaciones histológicas que van cambian­
países centroamericanos; regiones de mata Atlántica do, de acuerdo al desarrollo de la respuesta inmuni­ Figura 27-3. Leishmaniosis tegumentaria. (A) y (B) De las extremidades superiores y mejilla (Cortesía del Dr. Telmo
paralela a la costa en Brasil y algunas zonas tropica­ taria. Femández, Guayaquil, Ecuador). (C) Ulcera de los chicleros con compromiso del pabellón auricular. (D) Ulceras
les del pacífico en Colombia. En la lesión cutánea comienza como una pápula diseminadas con aspecto erisipelatoide.
En algunos países la leishmaniosis recibe nom­ en el sitio de entrada del parásito. Hay una'reacción
bres populares, como "úlcera de los chicleros" en inflamatoria con hiperplasia del epitelio y necrosis
México, "uta" para las formas cutáneas y "espundia" de la dermis que provoca la úlcera, lo que ocurre, dificil su ubicación. La lesión puede ·progresar a la niendo parásitos, con escasa formación de úlceras o
para las formas cutáneo-mucosas en Perú y Bolivia, usualmente, dentro de los seis meses. Las úlceras cicatrización. granulomas, y presencia de agrupamientos de linfo­
pian bois en las Guayanas. suelen ser circulares, de bordes bien delimitados, Las lesiones mucosas se caracterizan por una citos y células plasmáticas.
El ciclo de transmisión usualmente es complejo adquieren un tinte violáceo, y no son dolorosas; los reacción granulomatosa necrotizante y con pocos
y por lo general existe especificidad entre los ganglios regionales pueden estar agrandados, tal vez, parásitos; las células inflamatorias más abundantes Sintomatología. La lesión cutánea típica es la
reservorios y los vectores de cada subespecie de debido, principalmente, a la infección secundaria. son las células plasmáticas y linfáticas. La destruc­ úlcera (Figura 27-3 y Lámina 20). Al inicio, en .el
Leishmania (Tabla 27-2). En la superficie de la úlcera hay un exudado con ción de la mucosa de la orofaringe conlleva, a su vez, sitio de la picadura e inoculación del parásito; apa­
Los vectores del parásito son especies del géne­ polímorfonucleares. En el tejido inflamátorio, se la pérdida de cartílago, mas no de tejido óseo. Las rece un eritema pruriginoso que evoluciona a pápula
ro Lutzomyia (en el Nuevo Mundo, 44 especies son observa histiocitos conteniendo amastigotos, los lesiones se toman fagedinizantes, lo cual explica las y vesícula pustulosa de base indurada, que luego se
potenciales vectores), que tienen su hábitat general­ cuales están en reproducción, invadiendo otras célu­ graves alteraciones funcionales de la respiración, la abre como una pequeña úlcera, la que se cubre de
mente en las zonas rurales, siendo las hembras las; posteriormente, la reacción histiocitaria es re­ deglución y las complicaciones pulmonares como una costra. La lesión inicial puede ser única o múl­
hematófagas las que transmiten la infección. Los emplazada por una granulomatosa, con aumento de las bronconeumonías que pueden ser fatales. tiple y, en ocasiones, las lesiones pueden confluir;
mosquitos viven en siqQs. oscuros y húmedos como, linfocitos y células plasmáticas, célula_s epitelioides En la leishmaniosis difusa o anérgica, hay infil­ estas úlceras de mayor tamaño generalmente tienen
· por ejemplo, los huecos de los árboles, cuevas, res­ y células gigantes de Langherans; en estás circuns­ '' trado difuso de aspecto nodular del tejido celular

l
bordes netos y edematosos con un color violáceo, son
quicios entre las piedras, etc. Es importante conocer tancias, disminuye el número de parásitos y se hace subcutáneo con abundancia de histiocitos conte- indoloras y cuando se retira la costra que la cubre, se
248 PARAS/TOLOGIA MEDICA LEJSHMANJOSJS 249

aprecia un fondo granulomatoso grueso, hiperémico, Diagnóstico. El diagnóstico definitivo requiere nina). Consiste en la inoculación intraepidérmica de vector, impidiendo la picadura. Es recomendable
sangrante. Si la lesión se ha infectado, lo cual es la demostración del parásito. El diagnóstico clínico una suspensión o lisado de promastigotos de para turistas o personas que entran a las zonas endé­
frecuente, se aprecia un exudado blancoamarillento se basa: a) en las características mencionadas pre­ Leishmania procedentes de cultivo. La aparición de micas por períodos cortos de tiempo.
que en ocasiones puede tener mal olor, con dolor viamente, siendo las más importantes: lesión de más una mácula- pápula en el punto de inoculación a partir El control del vector, generalmente, se hace con
)ocal y desarrollo de linfangitis y aumento de los de cuatro semanas de duración, no dolorosa, con un de las 48 horas, se considera positiva (usualmente el uso de insecticidas de acción residual, su efecto
ganglios regionales. Morfológicamente, es muy di­ fondo granulomatoso grueso y con bordes indurados, un tamaño igual o mayor de 5 mm). La prueba suele es temporal y sólo será eficiente si la transmisión es
ficil distinguir las lesiones causadas por las diferen­ violáceos; y b) el antecedente epidemiológico. Evi­ ser positiva a partir de un mes de adquirida la infi;c­ intradomiciliaria.
tes especies de Leishmania; sin embargo, se acepta 'dentemente, según las características climatológicas ción. La sensibilidad generalmente es superior al
que L. V. braziliensis es la más agresiva. Las zonas y ecológicas de la zona, es importante diferenciar de 90%, pero los falsos negativos son más frecuentes al Leishmaniosis cutánea del Viejo Mundo
de la piel más afectadas son las descubiertas, princi­ otras lesiones cutáneas, tales como lesiones piógenas, inicio de la infección. La especificidad es alta en
palmente cara, miembros superiores e inferiores. Es de heridas contaminadas, ulceraciones varicosas, áreas en donde la enfermedad de Chagas y Kala­ Epidemiología.Esta leishmaniosis es causada por
raro observar lesiones en la palma de las manos, micosis cutáneas, etc. El diagnóstico de las lesiones azar no sean endémicas. Leishmania tropica, L. major y L. aethiopica. La
planta de los pies o cuero cabelludo. No todas las mucosas debe diferenciarse de micosis (en especial Jeishmaniosis conocida como botón de oriente de
lesiones evolucionan hacia la ulceración; pueden de paracoccidiodomicosis), neoplasias de la cavidad Pruebas serológicas. La inmunofluorescencia tipo seco y de distribución urbana, es causada por
observarse lesiones infiltrativas en placas, nódulos oral, linfomas, rinoescleroma, sífilis, etcétera. indirecta y ELISA son los métodos más usados para L. tropica. Por su parte, el botón de oriente de tipo
subcutáneos o formaciones vegetantes (verrucomas). El diagnóstico parasitológico requiere la demos­ la detección de anticuerpos. Dan reacción cruzada, húmedo y de distribución rural, es producido por L.
· Un porcentaje aún no bien precisado de pacien­ tración de los amastigotos en el frotis de la lesión y/o principalmente con enfermedad de Chagas y Kala­ major, y se la considera una zoonosis, donde los
tes (aproximadamente 1 0%) desarrolla lesiones mu­ biopsia, o de los promastigotos a través de los me­ azar. Teniendo en cuenta que las diferentes especies roedores son los principales reservorios. La L.
cosas (Lámina 20). Generalmente, éstas aparecen dios de cultivo in vi/ro. de Leishmania varían considerablemente en cuanto aethiopica pareciera ser la más agresiva por tender
cuando las lesiones cutáneas han cicatrizado, pero a su capacidad para inducir anticuerpos detectables, a producir lesiones mucosas.
en determinadas ocasiones, pueden ser concomi­ Frotis de la lesión. Hay varios métodos para en Jeishmaniosis tegumentaria estas pruebas son poco
tantes. El período en que una persona puede desa­ tomar la muestra; el mayor éxito se obtiene cuando usadas por limitaciones en la sensibilidad y especi­ Sintomatología. Las lesiones producidas por L.
rrollar lesiones mucosas varía desde algunos meses la lesión es reciente y se la toma del borde de la ficidad. Nuevas fracciones antigénicas, con mayor major son generalmente ulcerativas, con exudados,
a años (> 30 años), pero en la mayoría de los casos lesión, previa limpieza de la misma. La muestra pue­ especificidad son futuras alternativas. las que tienen un tiempo de incubación entre una
esto ocurre en los cinco primeros años, posteriores de obtenerse por raspado con hoja de bisturí, espá­ semana a dos meses. Las lesiones están usualmente
a la aparición de la lesión cutánea primaria. Las tula, mondadiente o por aspiración con una aguja Tratamiento. Las drogas de elección son los localizadas en los miembros, y el tamaño promedio es
lesiones·en las mucosas, generalmente se inician en hipodérmica o micropipeta. La mejor 111uestra es antimoniales pentavalentes que pueden aplicarse por de 3-6 cm y generalmente no producen metástasis a ·, ¡
el tabique nasal (Íercio inferior o medio) y poste­ aquella rica en linfa, con abundantes histiocitos y sin vía intravenosa, intramuscular e intralesional. Los las mucosas. Las lesiones por L. tropica, afectan
riormente se extienden a los cornetes nasales y las sangre, gérmenes o mucus que impiden una buena más usados son el antimoniato de N-metilglucamina principalmente a los niños; se localizan por Jo gene­
mucosas de la orofaringe, paladar (incluye úvula), observación. El método de coloración es el Giemsa (Glucantime®) y el estibogluconato sódico (Pentos­ ral en la cara; el tamaño promedio menor es de 1 -2 cm;
laringe y en los casos severos, puede comprometer y debe observarse con objetivo de inmersión por 30 tam®). Como el antimonial es tóxico y debe admi­ son menos agresivas que ·1as producidas por L.
las cuerdás vocales y tráquea. Al inicio, se aprecian minutos. Los parásitos se encuentran libres o en el nistrarse por períodos prolongados de dos a cuatro major, y el tiempo de incubación es de 2-4 meses. Las
lesiones inflamatorias, hiperémicas, granulares, poco interior de los histiocitos. En lesiones recientes y no semanas, es aconsejable evaluar el estado cardíaco, lesiones suelen curar espontáneamente y dejan una.
dolorosas y de escaso sangrado. Cuando se compro­ tratadas, el hallazgo de los amastigotos es frecuente, renal y hepático del paciente antes y durante el tra­ cicatriz en bajo relieve que suele ser bastante carac­
mete la mucosa del paladar blando, las lesiones Jo que no ocurre en lesiones contaminadas o cróni­ tamiento. Está contraindicado su uso en las gestantes. terística. L. aethiopica generalmente causa lesiones
granulomatosas puede dar una imagen de cruz, de­ cas. Las drogas de segunda línea son la anfotericina únicas, localizadas en la cara. Puede extenderse a
nominada la cruz de Escome/. Las lesiones granu­ B y la pentamidina. Ambas son más tóxicas que los través de pápulas satélites, produciendo lesiones en
lomatosas pueden evolucionar a ulceraciones. En Cultivos. Se puede realizar a partir del material antimoniales y requieren que su uso sea intrahos­ placas o ulcerativas. Tiende a curar lentamente en
casos más avanzados, se puede observar amputa­ obtenido para el frotis o de biopsia, la cual debe pitalario. períodos entre 2-5 años.
ción del tabique (tomando una configuración que se triturarse antes de lá inoculación al medio de cultivo. Se han ensayado otras drogas alternativas como
ha denominado nariz de tapir o lwanucoide), El más usado es el NNN suplementada con sangre el ketoconazol, allopurinol, rifampicina, levamisol, Diagnóstico y tratamiento. Tanto los procedi­
cornetes o parte del ala de la nariz. El severo com­ defibrinada de conejo (15%). Los cultivos deben nifurtimox, fenotiazina, paromomicina tópica, con mientos de diagnóstico, como l¡l) tratamiento, son los
promiso de la epiglotis, cuerdas vocales y la trá­ mantenerse a 23ºC; éstos se toman positivos entre resultados variables, pero usualmente con menor mismos que se utilizan en la leishmaniosis tegu­
quea, conlleva a la pérdida de voz (disfonía), dolor 3-30 días, siendo lo usual de 7 a 15 días. efectividad que los antimoniales pentavalentes. mentaria americana. Las lesiones por L. aethiopica
a la deglución de los alimentos (disfagia), y dificul­ generalmente no responden á las dosis usuales de
Control. El control de la leishmaniosis es com­
tad respiratoria. Los pacientes con compromiso se­ Biopsia. Debe hacerse en el borde de la lesión y antimoniales pentavalentes, por Jo que se recomien­
vero y crónico están propensos a infecciones respi­ plejo y requiere la aplicación de medidas integradas
el material obtenido se utiliza para el estudio histo­ da el uso de pentamidina.
ratorias intercurrentes (usualmente aspirativas) y a patológico y la búsqueda del parásito. Este material con enfoque multidisciplinario. Lo más frecuente es
la muerte por complicaciones. también se puede usar para la determinación de la que tenga que aplicarse varios métodos, como el
En la leishmaniosis difusa, donde existe una in­ especie de Leishmania, mediante la hibridización de diagnóstico y tratamiento precoz (detectando a los BIBLIOGRAFIA
suficiencia inmunitaria específica, las lesiones se K-ADN y el uso de los anticuerpos monoclonales. pacientes pasiva o activamente), lucha contra los
manifiestan por infiltraciones difusas de la piel y el El diagnóstico inmunológico se refiere a la de­ vectores y reservorios, gestión ambiental, educación, Bryceson ÁDM. Leishmaniasis. In: Manson-Bhar PEC,
tejido celular subcutáneo, dando lugar a ondulacio­ tección de una_ respuesta inmune mediada por célu­ participación comunal y protección personal. Apted Fíe. Manson's Tropical Diseases. 20th ed.
nes que, cua.ndo se localizan en la cara, dan el aspec­ las o de anticuerp,Qs:específicos para Leishmania. La protección individual se basa en el uso de Loridón: Saunders, 1996.
to de lepromas; en estas lesiones los parásitos son
abundantes. Jntradermorreacción de Montenegro (/eishma- í repelentes o impregnación de vestidos con perme­
trina, que establecen una barrera entre el sujeto y el
Killick-Kendrick R. Phlebotomine vectors in the leish•
maniasis: a review. Medica! and Veterinary Ento- ·

¡
250 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 28
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Definición. Es la infección de mamíferos y de cuyo borde libre lleva un flagelo que emerge por la
triatominos producida por un protozoo flagelado, el extremidad anterior. El tripomastigoto (Hoare y
T1ypanosoma cntzi. En el hombre, la infección pue­ Wallace, 1966) corresponde a la "forma trypanosó­
de ser congénita o adquirida y afecta, en grado varia­ mica" de Wenyon (1926). Se lo encuentra en la
ble, diversos órganos y sistemas, especialmente el sangre de los mamíferos y en el intestino posterior
corazón y el tubo digestivo. de los triatominos. No se multiplica, pero constitu­
Sinonimia: tripanosomosis americana. ye la forma infectante para los mamíferos y los
triatomas. En los mamíferos, es el diseminador de
Biología la infección por vía sanguínea (Figura 28-1 y Lámi­
na 21).
El Trypanosoma cn;,;i es un protozoo mastigó­
foro perteneciente a la familia Trypanosomatidae, Epimastigoto. Corresponde a la crithidia de la
en cuyo ciclo biológico intervienen mamíferos y un antigua clasificación. También es de aspecto fusifor­
insecto vector. Los hospederos mamíferos pueden me, de unos 20 µm de largo, con un kinetoplasto
ser el hombre y algunos animales domésticos (el localizado · por delante del núcleo, o a su nivel, y
perro o el gato) o silvestres (diversos mamíferos, presenta una corta membrana ondulante y un flagelo
especialmente, los roedores y los carnívoros). libre. Es la forma de multiplicación del parásito en
En sus diversos hospederos y en medios de cul­ el intestino del triatoma y la predominante en los
tivo, T. cruzi presenta tres aspectos morfológicos .medios de cultivo.
fundamentales (Figura 1-2, véase el Capítulo !: El
parásito).

Tripomastigoto. De aspecto fusiforme, de unos


20 µm de largo, con citoplasma granuloso y un nú­
cleo central vesiculoso. Posee un kinetoplasto sub­
tenninal, posterior al núcleo, del cual emerge una
membrana ondulante que recorre al parásito y en

Figura 28-1. T1ypanoso111a cruzi. (A) Tripomastigoto en


sangre de mamifero. (B) Pseudoquistes de amastigotos en
miocarditis aguda chagásica.
252_ PARAS/TOLOGIA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAGAS 253

Amastigoto. Es la "forma leishmanoide" de fornía), hasta el paralelo 49º latitud sur (región
Wenyon. Se trata de un elemento redondeado, de central de la Argentina). En esta extensa región,
unos 2 µm de diámetro, en el cual se distingue el prevalecen las condiciones ecológicas favorables para
núcleo y el kinetoplasto. Aparentemente es aflage­ la transmisión y la mantención de la parasitosis.
lado al •microscopio de luz, pero en la ultraestructu­ La severidad e irreversibilidad de las lesiones
ra se observa que posee un corto flagelo no emer­ cardíacas y de otros órganos, provocan invalidez y
gente; es la forma de multiplicación del parásito y mortalidad entre los grupos económicamente acti-
lo hace en el interior de las células del mamífero • vos. Sin embargo, las estadísticas sanitarias no refle­
(Figura 28-1 ).
Los insectos vectores son reduvídeos, de la fa­
jan la verdadera magnitud del problema, porque la
enfermedad prevalece en zonas suburbanas o rurales t1�(���*���, �
milia de los triatominos, y están representados por donde la atención médica no capta, en su integridad, sangre
diversos géneros de triatomas. Estos insectos se in­ la importancia de la infección.
fectan al ingerir la sangre de los mamíferos que El conocimiento de la magnitud de la infección HOMBRE Y OTROS MAMil?EROS
contiene tripomastigotos (Figura 28-2A). En el lu­ chagásica y su repercusión sobre la salud y la econo­ PICADURA (a)
men del intestino medio del insecto, los parásitos se mía de los países latinoamericanos, varia grandemen­
multiplican muy activamente como epimastigotos te y, en especial, sus formas clínicas. En esta situa­
por fisión binaria y, al cabo de quince a treinta días,ción influye la deficiente investigación clínica, la
se desarrollan los tripomastigotos metacíclicos en falta de recursos para el diagnóstico, la ausencia de
el intestino posterior del triatoma. Cuando el insec­ estudios anatomopatológicos, sobre todo en las muer­
to infectado pica al mamífero, emite deyecciones tes súbitas que ocurren en el área rural, etcétera.
con tripomastigotos, que atraviesan la piel por el En la Argentina, la población expuesta al riesgo
sitio de la picadura o por las mucosas. de contraer la infección se estima en alrededor de
En el mamífero, los tripomastigotos metacíclicos diez millones, con 2.500.000 individuos infectados
se introducen en las células del tejido celular laxo, de los cuales el 25 ó el 30% tendría algún grado de
vecino al sitio de la penetración, y adquieren la for­ daño miocárdico. El vector más importantes es el
ma de amastigotos. Los amastigotos se multiplican Triatoma infestans. La lesión visceral más frecuente (A)
por fisión binaria, repletan la célula, que termina pores la cardíaca, y luego, las megaformaciones diges­
romperse, y salen los parásitos a la circulación bajo tivas y el compromiso del sistema nervioso central.
el aspecto de tripomastigotos, diseminándose por En Bolivia, las áreas de endemia se extienden
todo el organismo. Estos tripomastigotos penetran desde la zona de los valles de los Andes ( J.000-
en nuevas células, se transforman en amastigotos 2.800 metros de altitud) al plano (400 metros de
para reproducirse, romper las células repletas de altitud). El vector predominante es el T. infestons.
parásitos y vuelven a circular como tripomastigotos, Aunque se carece de estudios sistemáticos sobre Figura 28-2. A. Ciclo evolutivo de Trypa­
nosoma cn,zi. Los triatornas se infectan
repitiendo muchas veces este ciclo. El ciclo biológi­ prevalencia, las formas cardíacas y las megafor­
maciones digestivas serían más frecuentes en la zona al ingerir sangre de mamíferos que con­
co se completa cuando los tripomastigotos son inge­
ridos por los triatomas hematófagos. tiene tripomastigotos (a). En el intestino
de los valles.
medio, los parásitos se multiplican por
En suma, en los triatomas la infección esencial­ En ·Brasil, la enfermedad de Chagas es un pro­
fisión binaria como epimastigotos (b) y al
mente es del tubo digestivo, con tripomastigotos en blema importante. Las áreas de mayor prevalencia
cabo de quince a treinta días se desarro­
el intestino anterior y posterior, y con epimastigotos se encuentran en el centro, sur, este y noreste, las llan los tripomastigotos en el intestino
en el intestino medio. En el mamífero, la infección es cuales son, precisamente, las zonas más densamen­ posterior del insecto (c). Cuando el insec­
sanguínea y tisular: en la sangre circulan los tripo­ te pobladas del país. En el norte, y en el oeste, la to infectado pica al mamífero, emite
mastigotos, que son incapaces de multiplicarse, y infección es menos común. De tanta trascendencia deyecciones con tripomastigotos metacíclicos
en el interior de las células se encuentran los como el daño cardíaco es el compromiso de los que atraviesan la piel por el sitio de la
amastigotos, los cuales constituyen las fonnas de órganos digestivos, especialmente en los Estados de picadura o por las mucosas ( d). Los
multiplicación del parásito. Goiás, Sao Paulo y Minas Gerais, lugares en los que tripomastigotos penetran a las células y se
es más frecuente la observación de megaesófago transforman en amastigotos, los cuales se
Epidemiología que de megacolon. Los vectores más importantes multiplican por fisión binaria, repletan la
son, para el ciclo doméstico, el Panstrongylus me­ célula hospedera que termina por romper­
La enfermedad de Chagas constituye uno de los gistus, Triatoma infestans y Rhodnius pro/ixus, y se y salen a la circulación como tripomas­
principales problemas de salud pública en diversos para el ciclo selvático el Panstrongylus geniculatus, tigotos, diseminándose por todo el orga­
países latinoamericanos. P. /ignanis, Triatoma dimidia/a, etc. El número de nismo y repiten muchas veces este ciclo
De acuerdo con la OMS existirían alrededor de individuos infectados se estima en no·menos de diez (e). Finalmente, los tripomastigotos son
24 millones de personas infectadas en el continente. millones. ingeridos por los triatomas hematófagos.
Los triatomas que transmiten la infección por T. En Colombia, la infección ha sido encontrada B. Mecanismos de transmisión de Trypa­
cruzi, se distribuyen en un área que se extiende en sectores rurales de los departamentos centrales nosoma cruzi (ciclo doméstico y ciclo sil­
º
desde el paralelo 43 de latitud norte (sur de Cali- del país. Se han descrito casos humanos de cardio- vestre).
254 PARAS/TOLOGIA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAGAS 255

palía y de transmisión congénita. Los vectores prin­ en los demás países latinoamericanos. Es trascen­ medad de Chagas, a los cuales se les implanta un Patología
cipales son Rhodnius prolixus y Triatoma dimidia/a. dente la disparidad de las manifestaciones clínicas riñón infectado con T. cruzi;
En Chile, el área de endemia se extiende desde en las diferentes zonas geográficas: la enfermedad - por la leche materna: sería una remota posibi­ El Trypanosoma cruzi constituye una compleja
º
el paralelo 18 en el norte (I Región), hasta el pa­ de Chagas presenta una patología regional bien lidad de· infección. En la literatura existe un caso población de parásitos tanto de mamíferos domés­
ralelo 34º (VI Región). El vector es el T. infestans, marcada. El grado de compromiso cardíaco y diges­ bien documentado de este mecanismo de transmi­ ticos o silvestres, como el insecto vector. Cuando se
cuyo biotopo es característico del paisaje agreste y tivo varía grandemente entre los países de las cuen­ sión. estudian las cepas aisladas de estos diversos hospe­
su hábitat es domiciliario y peridomiciliario, infes­ cas del Pacífico y del Atlántico. En Chile, la insufi- - por la manipulación de sangre y de animales deros, se observa una gran variedad en la morfolo­
tando la vivienda campesina y alimentándose con la ' ciencia cardíaca no es frecuente, aunque no se tienen infectados, como ocurre en las infecciones acciden­ gía, virulencia, distinta susceptibilidad á los agen­
sangre del hombre y de los animales domésticos. datos sobre la incidencia que pudiera tener la enfer­ tales que se producen en los laboratorios que traba­ tes quimioterápicos más que cuando se las estudia
Desde esta situación eminentemente rural, el insec­ medad de Chagas en la muerte súbita; es más fre­ jan en la enfermedad de Chagas experimental, o en en módulos experimentales. Se ha estudiado con
to ha invadido los alrededores de las zonas urbanas, cuente el desarrollo de megacolon y, en menor pro­ los individuos que descueran animales salvajes o creciente interés las características bioquímicas e
las cuales constituyen centros de atracción indus­ porción, de megaesófago; las formas agudas, excep­ semidomésticos infectados. isoenzimáticas de las cepas del T. cruzi. La electro­
trial, con emigración de gente en busca de mejores to la transmisión congénita, es rara. En el norte En forma experimental, se ha demostrado la trans­ foresis isoenzimática, un método que detecta las
expectativas económicas. Al trasladar consigo sus argentino es muy frecuente observar formas agudas misión del T. cruzi por vía oral, sea por infección diferencias entre enzimas que presentan propieda­
enseres y utensilios, han llevado también triatomas de la infección y se describe compromiso cardíaco directa con el flagelado o mediada por moscas (Musca des catalíticas comunes, pero que tienen estructuras
infestando así las poblaciones marginales de las y digestivo. En Venezuela, la cardiopatía es muy domestica), que previamente han ingerido deyec­ moleculares diferentes, ha permitido caracterizar
ciudades. Incluso se han encontrado triatomas en importante, pero no se han descrito megaformacio­ ciones de triatomas infectados con el parásito. Pro­ las poblaciones del T. cruzi en relación, con su perfil
vagones de ferrocarril. De un número superior a nes Y, por fin, en Brasil, se han encontrado miocar­ bablemente, este mecanismo de transmisión tenga bioquímico; es decir, con sus zimodemas. Así, se ha
cincuenta mil triatomas capturados en las zonas de diopatías graves y es muy frecuente el megaesófago poca o ninguna significación para la infección direc­ determinado que en Brasil el zimodema l .(Zl) es
endemia, un tercio está infectado con T. cruzi. En y el megacolon. ta del hombre. característico de las cepas de animales silvestres y ·
algunas zonas rurales del norte del país, se encuen­ La ecología de los vectores es abordada en otra Es más frecuente que la infección chagásica ocu­ de los triatomas, mientras que Z2 se encuentra en
tra el Triatoma spinolai, responsable de la manten­ parte de este texto. (Véase el Capítulo 53: Triatomas, rra en la niñez, aunque la sintomatología suele apa­ las cepas del hombre y los animales domésticos. En
ción de un ciclo de infección silvestre, pero con chinches y cucarachas) recer muchos años después de la primoinfección. Chile se ha observado Zl, aislado casi exclusiva­
poca trascendencia para la transmisión de T. cruzi Los hábitos domiciliarios o selváticos de los di­ Por causas no determinadas, el compromiso visceral mente de T. spinolai de animales silvestres de las
al hombre. La prevalencia de la infección en éste, versos géneros y especies de triatominos determi­ miocárdico o del tubo digestivo es más frecuente en regiones III al sur, mientras que también se encuen­
determinada mediante la aplicación del xenodiag­ nan un ciclo de transmisión del T. cruzi de tipo el sexo masculino. tran en T. infestans de las I y II regiones. En cam-
nóstico; varía entre 8 y 10%, pero aumenta a 18% doméstico o silvestre (Figura 28-2B). En el ciclo
al. emplearse pruebas serológicas. Se estima el nú­ doméstico, están involucrados los triatomas domi­
mero de los infectados en 350.000. Las formas cró­ ciliarios y peridomiciliarios y el hombre junto con
nicas, la cardiopatía y las megaformaciones diges­ sus animales domésticos, especialmente los perros
tivas, son frecuentes; en cambio, las formas agudas y los gatos. En el ciclo silvestre, intervienen triato­
son excepcionales, salvo las congénitas. mas con hábitat diferente al del hombre (selva, con­
En Ecuador se han comunicado casos agudos de trafuertes cordilleranos, etc.), y animales selváti­
enfermedad de Chagas en las provincias de Guayas, cos, sobre todo diversos géneros de roedores y otros
Esmeralda, Manabí, Los Ríos y, principalmente, en mamíferos. De vez en cuando suelen producirse
la región costera, en donde existe transmisión urba­ cruces entre ambos ciclos, lo que explicaría, en parte,
na de la infección. También se han descrito miocar­ la perpetuación de la infección en la naturaleza.
diopatías crónicas. Los principales vectores son Tria­ El hombre puede infectarse con T. cruzi, me­
toma dimidia/a y T. carrioni. diante diversos mecanismos:
En Panamá, el principal vector es el Rhodnius - por las deyecciones de triatominos, el cual es
pallences. Si bien existe compromiso cardíaco, no el más importante. El insecto, al picar en zonas des­
se han encontrado megaformaciones digestivas. cubiertas de la piel del hombre durante el sueño,
En Perú la infección es transmitida por T. in­ elimina sus heces con los tripomastigotos metacíclicos
festans, que pulula en diecisiete de los veintitrés que penetran por el sitio de la picadura o por las
departamentos del país. La infección humana es de mucosas;
un 10% en el valle de la costa del sur; es decir, que - por la placenta, lo que detennina la infección
se calcula la existencia de unos 80.000 individuos congénita. Una madre infectada puede transmitir los
infectados. T. cruzi circulantes en su sangre durante la segunda
En Venezuela, el área endémica abarca el 80% mitad de la gestación;
del territorio y comprende más de cuatro millones de - por las transfusiones sanguíneas, lo que cons­
personas expuestas al riesgo de infectarse. El princi­ tituye un peligro real, puesto que el T. cruzi mantie­
pal vector es R. prolixus. El compromiso cardíaco ne su vitalidad en los bancos de sangre, a pesar de la
constituye un importante problema médico asistencial Figura 28-3. Corazón chagásico. Aumento del grosor de
temperatura del refrigerador, hasta por dos meses; las paredes ventriculares, lo que contrasta con la delgadez
y epidemiológico. No se..,han descrito megas digess"·.. ,_. .. - por trasplante de órganos. Principalmente se
de la punta del corazón (aneurisma). (Cortesía del Dr.
tivos en este país. · - ha descrito en trasplante renal, sobre todo en recep­ Fritz Kéiberle, Brasil).
Con algunas variaciones, el problema se repite tores de órganos que sean seronegativos para enfer-
256 PARASITOLOGJA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAGAS 257

bio, 22 se ha obtenido de T. infestans, del hombre


y de animales domésticos de todo el país. El zimo­
dema Z2 se ha dividido en 22a, similar a 22 de
Brasil, y Z2b, similar a 22 de Bolivia, el cual es el
más prevalente en Chile. Por otra parte, mientras en
Venezuela la mayoría de las cepas aisladas de pa­
cientes son Z 1, en el este de Brasil predomina 22.
En Venezuela la mayoría de las cepas aisladas de
pacientes con enfermedad de Chagas es de ZI. El
estudio de estos marcadores isoenzimáticos permi­
tirá conocer mejor los ciclos domésticos y silvestres
del T. cnizi.
En relación con el hospedero, los animales de
sangre fiía y las aves son naturalmente refractarios al
T. cr11zi. En los mamíferos, animales susceptibles, se
desarrolla una inmunidad parcial contra el T. cnizi.
Aunque se conocen diversos grados de inmunidad
humoral y celular. (Véase el Capítulo 5: !11m11no/o­
gía en las i11fecciones parasitarias), se ignoran
muchos aspectos de los mecanismos involucrados.
En la actualidad, está en estudio la importancia de
los factores genéticos en esta parasitosis.
( En la fase aguda de la infección, algunas de las
lesiones probablemente se deban a la presencia de
los parásitos, pero las lesiones inflamatorias de la Figura 28-5. Megacolon chagásico. (A) Autopsia (Corte­
fase crónica se producirían por mecanismos inmu­ sía del Dr. Fritz Koberle, Brasil). (B) Megacolon chagásico
nitarios. En efecto, en la fase crónica las lesiones del obtenido de una pieza operatoria. Compárese con un
corazón y del tubo digestivo se caracterizan por la colon normal. (Cortesía del Dr. Edson Reis Lopez, Bra­
presencia de infiltrados linfocitarios difusos y son sil).
muy escasos los parásitos tisulares. En la cardiopatía
crónica, es probable la existencia de una respuesta
inmune mediada por linfocitos contra el tejido car­ glios, espleno y hepatomegalia, meningoencefalitis · ra 28-3). El tubo digestivo, principalmente el esó­
diaco, puesto que se puede observar una citólisis de y cardiomegalia por la dilatación de las cavidades fago y el colon, aparecen elongados y muy dilata­
las células musculares vecinas a los linfocitos y sin del corazón. En la fase crónica, el compromiso se dos, con importante hipertrofia de la capa muscu.­
la presencia de parásitos.) Figura 28-4. Megaesófago chagásico. (Cortesía del Dr. centra fundamentalmente en el miocardio y en el lar; son los megas digestivos tan característicos de
Edson Reis Lopez, Brasil). tubo digestivo. En estos casos, se desarrollan enor­ la fase crónica de la tripanosomiasis (Figuras 28-4
Experimentalmente, se ha demostrado que en la
inflamación en la enfermedad de Chagas participan mes cardiomegalias por ·1a dilatación e hipertrofia ·y 28-5).
mecanismos inmunitarios. La mayoría de los rato­ una inflamación predominantemente polimorfo­ del miocardio, con zonas de adelgazamiento de la El estudio histológico de la enfermedad de Cha­
nes susceptibles inoculados con el T. cr11zi, mueren nuclear y con la aparición de anticuerpos séricos pared ventricular que puede ocasionar un verdadero gas revela, ante todo, lesiones vasculares y perívas­
alrededor del décimo día de la infección y presentan aglutinantes y precipitantes. A medida que conti­ aneurisma, sobre todo en la punta del corazón (Figu- culares, alteraciones cuali y cuantitativas de los plexos
un intenso parasitismo tisular, pero sin miocarditis. núa la multiplicación endocelular del tripanosoma,
En los animales sobrevivientes y que pasan a la fase los componentes antigenicos, constituidos por los
crónica, se observa en el miocardio un progresivo parásitos muertos y el material proteico de las célu­
aumento de las lesiones inflamatorias, junto a una las destruidas, detenninan una inflamación predo­
disminución y desaparición del parásito i11 situ: Si minantemente linfoplasmocitaria y un ascenso de
bien existe una precoz sensibilización del sistema los títulos serológicos. Las parasitemias, al comien­
inmune, se viene a manifestar como una reacción zo muy elevadas, se van haciendo escasas. La infla­
inmunitaria mediada por células, a partir de la se­ mación va aumentando progresivamente, lo que
gunda semana de la infección. contrasta con la disminución -hasta casi desapare-
En el hospedero vertebrado, el T. cruzi produce cer- de los pseudoquistes en los tejidos.
una destrucción de células y de tejidos que resulta En la enfennedád de Chagas existe compromiso
proporcional a su velocidad de multiplicación. Como de los órganos ricos en sistema reticuloendotelial
es un protozoo que se multiplica en el interior de las (ganglios linfáticos, higado y bazo), sistema nervio­
células, se forman los pseudoqui�tes, que antes se so central, miocardio y órganos huecos, especial­
conocían como "nidos de leishmanioides". Al co­ mente el tubo digestivo. En la fase aguda de la infec­ Figura 28-6. Ganglio· nervioso del plexo de Auerbach (tinción argéntica). (A) Nonnal. (B) En un caso de megacolon
mienzo de la infección, el organismo reacciona con c;ión se observa un aumento del volumen de los gan- chagásico.
PARASITOLOGIA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAG.-1S 259

nerviosos periféricos y del (SNC), e inflamación de las nerviosas (Figura 28-6). Esta destrucción neuro­
tipo exudativo, productivo y con distinto grado de nal se produciría en la etapa aguda de la infección.
fibrosis, según la etapa de la infección. (Véase Figu­ De esta manera, los órganos sufrirían una de­
ra 4-6c, Capítulo 4: Patología general de las para­ nervación que, después de años de evolución, con­
sitosis). duciría a la aparición de las lesiones de la etapa
La transmisión trasplacentaria de T. cnizi es crónica. Por lo tanto, las lesiones del corazón y la
posible en la segunda mitad del embarazo; es decir producción de megas no serian sino "secuelas" o
que, al igual que en la toxoplasmosis, este agente "palias" chagásicas. Con esta explicación, no sería
parasitario es capaz de producir fetopatías y no necesaria la perpetuación de los ciclos de multipli­
embriopatías. La transmisión es siempre un acci­ cación del parásito, puesto que "la suerte del
dente, en el cual se conjugan dos hechos contempo­ chagásico se juega en la etapa aguda de· la infec­
ráneos: parasitemia de tripomastigotos y aumento . ción", pudiendo aparecer las alteraciones aun en el
de la permeabilidad placentaria o multiplicación caso de que se hubiera erradicado el T. cntzi.
del parásito en ella. El desarrollo de un mega es dependiente del
Una madre que haya tenido un hijo chagásico, número de neuronas comprometidas. Después de
es posible que vuelva a tener otros niños infectados años, se produce la hipertrofia muscular, la dilata­
por vía trasplacentaria, lo cual, sin embargo, no ción y la elongación del órgano hueco. En el cora­
seria frecuente. No está todavía esclarecida la posi­ zón, al producirse la despoblación neuronal de los
bilidad de producción de abortos. Los parásitos ganglios parasimpáticos cardíacos, se establecería
producen en el feto una infección generalizada, un desequilibrio neurovegetativo, con un predomi­
aguda, sin los signos de puerta de entrada o chagoma nio relativo del sistema simpático. Así, se produci­
de inoculación, con parasitemias e innumerables ría un trabajo cardíaco antieconómico que remata­
nidos de multiplicación en los tejidos, especialmen­ ría en la cardiopatía chagásica.
te a nivel del SNC, del miocardio, del sistema reti­ Esta teoría que, al decir de Kobérle, implica una
culoendotelial y de la musculatura esquelética. El nueva patología, la patología de las regulaciones, Figura 28-7. Signo oftalmoganglionar Romaña-Mazza. (A) Niña de 3 años de edad. (B) Lactante de siete meses de edad
niño, en el momento del nacimiento, puede presen­ está sustentada en una extensa serie de trabajos (Caso de la Dra. Lily Contreras Miranda, Combarbalá, IV Región, Chile).
tar bajo peso, prematurez, hepato y esplenomegalia, anatómicos y experimentales, cuya metodología se
y compromiso variable del corazón y del SNC. ha basado en el minucioso recuento neuronal de los
En los intentos de explicación etiopatogénica de plexos nerviosos intramurales de todo el tubo diges­ y catorce días, se desarrolla la enfermedad en la planos vecinos y no supuran. El complejo oftalmo­
las lesiones en la enfermedad de Chagas, se han tivo, del corazón, del sistema nervioso central, de cual se distinguen los períodos agudo, latente o ganglionar desaparece en unas cuatro semanas.
involucrado mecanismos inflamatorios, alérgicos, los bronquios y de los ganglios simpáticos. indeterminado, y crónico. El chagoma de inoculación es de rara observa­
vasculares y de denervación, siendo muy numerosas Período agudo. La inmensa mayoría de los pa­ ción en otras regiones cutáneas. En este caso, su
las investigaciones que ponen énfasis en uno por Sintomatología cientes adquiere la infección sin manifestaciones aspecto semeja otras afecciones de la piel y se bar¡.
sobre otros factores. Entre todos, la teoria de la clínicas evidentes y sólo alrededor del 5% de los descrito formas forunculoides, erisipelatoides,
denervación sustentada por Koberle y su escuela, es Se describirán, sucesivamente, las formas ad­ infectados hace la etapa aguda sintomática. Si bien tumoroides y lupoides. También se acompañan de
particularmente interesante. Mediante técnicas de quirida y congénita de la enfermedad de Chagas el período agudo se puede presentar a cualquier adenopatía satélite.
recuento de neuronas, estudiaron los ganglios (Tabla 28-1 ). edad, es mucho más frecuente en el niño. b) Compromiso visceral. Es más frecuente ob­
parasimpáticos de las vísceras del hombre y de los a) Chagoma de inoculación. La primoinfección servarlo en el niño. En el menor de dos años, se
animales chagásicos, verificando una acentuada Enfermedad de Chagas adquirida. Después o "chagoma de inoculación" habitualmente se pro­ presenta como un cuadro grave, caracterizado por
denervación, con disminución notable de las célu- de un período de incubación, estimado entre cuatro duce en la cara, pero también puede afectar otros fiebre de intensidad variable, habitualmente no
sitios. Cuando los tripomastigotos invaden la piel más elevada de 38ºC, hepatoesplenomegalia y
periorbitaria o conjuntiva!, se produce el complejo poliadenopatías generalizadas, anasarca, diarrea,
oftalmoganglionar, o "signo de Romaña-Mazza" signos bronquiales, cardiomegalia y meningo­
(Figura 28-7) caracterizado por un edema periocu­ encefalitis. En el niño mayor, el cuadro es seme­
TABLA28-l lar unilateral, bipalpebral, elástico, duro, de color jante, pero más atenuado y en el adulto es de rara
SINTOMATOLOGIA DE LA ENFERMEDAD DE CHAGAS violáceo ("ojo en tinta") e indoloro, que puede difi­ observación.
cultar la apertura palpebral; se presenta, además, El compromiso cardíaco se debe a una miocarditis
Chagoma de inoculación hiperemia de la conjuntiva, escasa secreción con­ de intensidad variable. Se describen formas de au­
1) Período agudo
Compromiso visceral juntiva!, dacriocistisis y adenopatia satélite, desta­ mento moderado del corazón, con escasa sintomato­
cándose un ganglio sobre los demás. Esta adenopa­ logía y ligeras alteraciones. del ECG; pero también se
A) Adquirida 2) Período latente o indeterminado tía compromete los ganglios tributarios del sitio de observan casos severos y graves, con gran car­
entrada, se asienta en la región preauricular y, con diomegalia, alteraciones francas del ECO e insufi­
Enfermedad menor frecuencia, afecta los ganglios supra e ciencia cardíaca descompensada. El ECG revela ta­
de Chagas Cardiopatía chagásica crónica infraauriculares, esternocleidomastoideos y retro o quicardia sinusal, alteraciones de la repolarización
· 3) Período crónico
;' i•'· :' : ·: :1 '�·· Megas digestivo y de otros sistemas submaxilares. :L9s ganglios son di_sc_ _re_tamente dolo­ ventricular, voltaje disminuido de QRS, signos de
rosos, de I a 2 cm de diámetro, no adherentes a los isquemia variables y reversibles, alargamiento del
260 PARASITOLOGIA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAGAS 261

espacio PR y, en escasa proporción, bloqueos A-V precordial y puede caer en la insuficiencia cardiaca, 2.500 g. El aumento del v.olumen del hígado y del
de primer grado y trastornos de la conducción in­ con toda la sintomatología que le es propia; también bazo constituyen los signos principales de la infec­
traventricular. El bloqueo de la rama derecha del haz suele ocurrir la muerte brusca en pacientes sin gran­ ción. El �ígado suele palparse entre dos y cinco
de Hiss y la extrasistolia ventricular, tan frecuentes des síntomas previos. En muchos casos, la radiolo­ centímetros por debajo del reborde costal, en la línea
en el período crónico, son excepcionales en esta fase gía muestra una sombra cardíaca nonnal en los medioclavicular y se presenta indoloro, de borde
aguda. (Véase el Capítulo 47: Parasitosis del cora­ estados iniciales de la etapa crónica, donde existe romo y superficie lisa; el bazo se palpa entre tres y
zón). Algunos casos pueden llegar a la insuficiencia todavía escasa reacción fibrótica del miocardio. La diez centímetros debajo del reborde costal, con si­
cardíaca, los cuales responden bien a la digitalización. cardiomegalia se hace evidente cuando aumenta la milares características palpatorias. Habitualmente,
Por lo general, los enfennos evolucionan en fonna fibrosis; en estos casos, actúan los mecanismos para el cuadro clínico evoluciona sin fiebre.
aparentemente benigna y curan en plazos de uno a mantener la dinámica circulatoria, produciendo la En alrededor del 50% de los casos se observan
dos meses. dilatación del corazón. Por ello, los casos con mar­ signos y síntomas de meningoencefalitis, con altera­
La meningoencefalitis suele observarse en el niño cada cardiomegalia presentan profundas alteracio­ ciones del LCR (hiperalbuminorraquia y elevado
menor; se caracteriza por trastornos motores, convul­ nes histológicas y existe relación entre el grado de número de linfocitos). El compromiso cardíaco, aun­
siones, vómitos y compromiso sensorial, con discre­ cardiomegalia y la miocarditis. que con n:ienor frecuencia, suele desencadenar una
tas alteraciones del LCR que son de mal pronóstico. Los pacientes con daño severo del miocardio insuficiencia cardíaca congestiva, con el ECG alte­
En resumen, el período agudo se presenta en desarrollan enonnes aumentos de tamaño del mús­ rado (aplanamiento de .la onda· T, alteración del
alrededor del 5% de los infectados chagásicos y entre culo cardíaco (Figura 28-3), insuficiencia cardíaca segmento S't, alargamiento del tiempo de conduc­
los afectados cerca del 90% son niños. La sintoma­ y fenómenos de tromboembolismo. La muerte súbi­ ción A-V, bajo voltaje, etc.).
tología se caracteriza por los signos de la primoin­ ta, por fibrilación ventricular, puede ocurrir en cual­ Además, suele observarse una anemia leve, a
fección (complejo oftalrnoganglionar o chagomas quier momento de la evolución de la enfennedad. veces con caracteres hemolíticos e ictericia. En la
cutáneos), fiebre, micropoliadenia, hepatoes­ (Véase el Capítulo 47: Parasitosis del corazón). piel, aparecen chagomas, como placas eritematosas,
plenornegalia y compromiso cardíaco y nervioso. b) Fonnas digestivas. Una ·porción no determi­ con una pústula central, localizados en las extremi­
Sin embargo, la intensidad de la sintomatología es nada de enfennos chagásicos desarrolla trastornos dades inferiores. En un estudio sobre once casos de
variable de un paciente a otro y con frecuencia pue­ del tubo digestivo que rematan en ia fonnación de enfermedad de Chagas congénita, en nueve compro­
den presentarse sólo algunas de las manifestaciones rnegaesófago y de megacolon. Más rara es la obser­ bamos compromiso ocular. Las alteraciones fueron
clínicas. El complejo oftalrnoganglionar tiene una vación de megas de otros órganos huecos no diges­ Figura 28-9. Autopsia de un caso de enfermedad de borramiento de los bordes de las papilas, edema y
evolución que puede ser de algunos días o de hasta tivos (megauréter, megavejiga, megas de la vía bi­ Chagas congénita. Niño prematuro con meningoencefalitis,
cuatro semanas; la miocarditis de uno o de dos me­ solevantamiento retinales de tipo nodular y de color
liar, etc.). Los trastornos de la motilidad del esófago 1 miocarditis, hepato y esplenomegalia. amarillento (Láminas -25-28).
ses y la meningoencefalitis, de pocos días. Los pa­ provocan una disfagia lógica, dolor epigástrico o
cientes que fallecen (1 al 13%) es por compromiso Sin embargo, no todos los niños con infección
retroesternal y regurgitaciones. Rezende ha descrito chagásica congénita presentan esta sintomatologia;
cardíaco o por meningoencefalitis. varias fases evolutivas de esta afección (Figura 28-8); ta; en las etapas avanzadas, el esófago prácticamen­ puede ocurrir que el peso del niño al nacer sea nor­
Período latente o indetenninado. Transcurrido en la primera, el esófago es de calibre nornial, pero
el período agudo, la sintomatología se apaga y se te no transporta su contenido, con retención por mal y haga sospechar la enfennedad, el hallazgo de
existe ya el fenómeno de acalasia, con retardo del largo tiempo, a la altura del cardias., Los pacientes ..
entra en un estado de latencia, caracterizado por una liepato y esplenomegalia.
tránsito esofágico; luego, aparece la dilatación del se desnutren y sufren de frecuentes infecciones del _.!? enfennedad de Chagas congénita debe ser
lenta multiplicación intracelular de los parásitos y órgano, con la producción del megaesófago propia­
oligoparasitemias, sin signos clínicos. La curación aparato respiratorio. Cuando el megaesófago se de­ considerada como grave, porque produce una eleva­
mente dicho, que puede alcanzar dos y tres veces el sarrolla en el niño, puede provocar trastornos del da mortalidad, especialmente en aquellos niños que
espontánea, con eliminación del parásito, es rara. calibre nonnal y, en los casos extremos, se agrega la
Este período puede durar indefinidamente durante crecimiento y del estado nutritivo, conduciendo a presentan sintomatología al riacer (Figura 28-9).
elongación del órgano. A medida que evoluciona el un verdadero enanismo chagásico. En otros, la causa inmediata del deceso suele ser
toda la vida o pasar a la fonna crónica de la enfer­ megaesófago, la sintomatología también aumen-
medad. En el megacolon, el signo cardinal es la estitiquez una enfennedad concomitante, sobre todo la bron­
Período crónico. Aparece en fonna habitual des­ pertinaz y progresiva. Al comienzo puede ocurrir coneumonía, dado que en la mayoría se desarrolla
pués de diez o más años de la primoinfección. Se que los lavados intestinales alivien al paciente, pero una distrofia grave, con profundas alteraciones de
caracteriza por el daño irreversible de algunos pa­ pronto se produce retención de las materias fecales las defensas inmunitarias.
rénquimas, especialmente el corazón y los órganos durante diez, quince o más días, con un desarrollo
huecos. enonne del abdomen. En tales condiciones, los en­ Enfermedad de Chagas transfusional. La in­
a) Cardiopatía chagásica crónica. Se estima que fermos deben recurrir al hospital para ser tratados fección por el T. cruzi a través de transfusión san­
alrededor del 30% de los infectados chagásicos su­ del fecaloma, mediante sifonajes. También es co­ guínea, puede producir un cuadro clínico de acuerdo
fre el compromiso cardíaco en la etapa crónica de la mún la complicación quirúrgica aguda por torsión con el estado inmunológico dél receptor. En inmu­
enfermedad. El daño comienza siempre en un perío­ intestinal o vólvulos. nocompetentes (pacientes previamente sanos y con
do subclínico, con alteraciones del ECG, el que co­ hemorragias), la infección pasa habitualmente in­
rrientemente indica un bloqueo completo de la rama Enfermedad de Chagas congénita. El paso del advertida y si aparece sintomatología (fiebres pro­
derecha del haz de Hiss y un hemibloqueo anterior T. cruzi al feto, durante la gestación, detennina un longadas por meses, adenopatías, hepatomegalia,
izquierdo. El paciente puede continuar con esta al­ cuadro clínico caracterizado por prematurez, hepato etc.), es tardía, y raramente se le asocia con la trans­
teración durante años o durante toda su vida, o bien, y esplenomegalia y compromiso variable del SNC y fusión, y la detección del T. cruzi es dificultosa. En
se hace sintomático·. En esie,'éiiso/'el enfenno pre­
senta disnea de esfuerzo, palpitaciones, dolor
Figura 28-8. Evolución progresiva del megaesófago
chagásico, según J.M. Rezende.
del miocardio.·(Véase el Capitulo 57: Transmisión
congénita de pdi"ásitos).
cambio, en el paciente inmunocomprometido el cua­
dro clínico generalmente es agudo y se manifiesta i
El peso del niño al nacer suele ser inferior a por fiebre alta y mantenida, con compromiso pro-
262 PARASITOLOGIA MEDICA ENFERMEDAD DE CHAGAS 263

gresivo del estado general; en estos casos, la pesqui­ y la Fé son más tardías. Sin embargo, todas ellas El desarrollo de una vacuna contra la infección y alopurinol. Infonne preliminar. Rev Med Chil 1994;
sa del T. crnzi en la sangre es relativamente fácil. pesquisan más del 95% de los casos crónicos. producida por T. cruzi sigue en etapa de experimen­ 122: 420-7.
En la actualidad, las reacciones más utilizadas tación. Se ha ensayado una gran variedad de antíge­ Arribada A, Apt W. Cardiopatías parasitarias. Santiago,
Diagnóstico son IFI y ELISA, las cuales han desplazado a la nos preparados con epimastigotos formolados, irra­ Chile: Ediciones de la Universidad de Chile, Facultad
El diagnóstico de la enfermedad de Chagas debe HAI por su menor sensibilidad y menor especifici­ diados, liofilizados o sometidos a hiperpresiones y de Medicina Sur, 1980.
fundamentarse en antecedentes epidemiológicos y dad y a la FC, por su alta complejidad. Sin embargo, ultrasonidos. También se ha experimentado con Arribada A. Cardiopatía chagásica: Historia natural. En:
clinicos. Entre los primeros, es importante conocer la HAI sigue siendo útil para encuestas seroepi­ tripomastigotos y amastigotos en cultivo de tejidos Alias A. Avances en las enfennedades parasitarias.
la procedencia del enfermo, tanto actual como del demiológicas, puesto que es una buena reacción irradiados. Los resultados son promisorios desde un Series Clinicas Soc Med Santiago 1988; 8(4):83:96.
pasado, puesto que las manifestaciones de la etapa para estudios de un gran número de muestras. punto de vista experimental, pero todavía se está Alías A, Morales M, Muñoz P, Barría M. El compromiso
crónica tardan años en aparecer, habitualmente más La elaboración de la librería genómica del T. lejos de su utilización en el hombre. Mayores pers­ ocular en la enfennedad de Chagas congénita. Rev
de diez, después del contacto con triatomíneos. Los cnizi, ha permitido la obtención de antígenos de pectivas se han vislumbrado con el uso de las llama­ Chil Pediat 1985; 56:137-41.
antecedentes clínicos del chagoma de inoculación ADN recombinantes y de péptidos sintéticos que das "cepas avirulentas" de T. cnizi, pero si bien los Atías A. Enfennedad de Chagas digestiva: Prevalencia y
son pobres, porque la mayoria de las primoinfe9- diferencian la respuesta inmune del paciente cha­ animales, con una infección primaria provocada por diferencias regionales en América Latina. En: Alías A.
ciones son leves. En las zonas de endemia chagási­ gásico agudo, crónico y congénito. Esta nueva he­ estas cepas, se hacen resistentes a nuevas infeccio­ Avances en las enfennedades parasitarias. Series Cli­
ca, todo niño menor, con compromiso sistémico, rramienta de laboratorio facilita el diagnóstico pre­ nes con cepas virulentas, es todavía peligrosa su nicas Soc Med Santiago 1988; 8(4):75-82.
partiéularmente cardíaco y del sistema nervioso coz, así como el estudio de la evolución de la infec­ aplicación en el hombre, porque aún no es posible Brener Z, Andrade Z. T1ypanasama cr11zi e Doen9a de
central, sin etiología clara, hace sospechar la ción. predecir la virulencia que podrían alcanzar en este Chagas. Río de janeiro: Guanabara Koogan, 1979.
tripanosomosis. En la etapa crónica, debe pensarse huésped y, además, porque se desconoce qué papel Brener Z: Recent development in the field of Chagas'
en ella frente a las cardiomiopatías y a cualquier Tratamiento podrían llegar a desempeñar en la producción de disease. Bull WHO 1982; 60:463-73.
cuadro de megaformación, especialmente digestivo. lesiones propias de la enfermedad de Chagas cróni­ Brener Z, Can9ado JR, Da Cunha LM y cols. An experi­
El diagnóstico parasitológico está basado en las Innumerable es la cantidad de medicamentos ca. (Véase el Capítulo 5: Inmunología en las infec­ mental and clinical assay with Ketaconazole in the
pruebas directas que demuestren la existencia de T. que han sido usados contra el T. cnizi. Algunos de ciones parasitarias). treatment of Chagas' disease. Mem lnst Oswaldo
cruzi, y en las indirectas, que consisten en reaccio­ ellos son eficaces desde el punto de vista experi­ Cruz 1993; 88:149-53.
nes serológícas. (Véase Sexta Parte: Diagnóstico de mental, pero son tóxicos ,m las dosis necesarias Control Contreras M, Schenone H, Borgoña JM. Infección chagá­
laboratorio de la parasitosis). para el hombre. Se usaron derivados 8-arnino qui­ sica en donantes de sangre de hospitales de las regio­
noleínicos, entre ellos la primaquina, la cual, aun­ De acuerdo con el perfil epidemiológico de la nes endémicas de Chile (1982-1987). Trascendencia
Diagnóstico parasitológico directo. Es aplica­ que tenía una buena acción terapéutica, producía en enfermedad de Chagas, la profilaxis racional debe epidemiológica del problema. Bol Chil Parasitol 1992;
ble especialmente en la etapa aguda de la infección, el hombre intolerancia digestiva y anemia hemolí­ perseguir la eliminación del insecto vector como 47:10-5.
cuando se pueden detectar con mayor facilidad los tica. En la actualidad, las drogas más usadas son el medida fundamental. Lo más importante radica en Gallardo R, Marr J, Sosa R. Therapeutic efficacy of
tripomastigotos en la sangre. En este sentido, se nifurtimox, sustancia tripanosomicida potente y el el mejoramiento de la vivienda campesina para ha­ allopurinol in patients with Chagas' disease. Am j
utilizan: benznidazol. El tratamiento con ellos requiere vigi­ cer poco probable su infestación por triatomas. Las Trop Med Hyg 1990; 43:159-66.
Examen microscópico directo de sangre fresca. lancia médica por las manifestaciones adversas. La viviendas infestadas deben ser rociadas con insecti­ Larca M, Larca J, Child R, Alías A y cols. Prevalencia de
Se usa en la fase aguda y es el método elegido para respuesta a)· tratamiento con estos medicamentos cidas de acción remanente, para lo cual se utiliza 1a infección por T1ypanosoma cruzi en paciente$
el diagnóstico rápido de las formas congénitas. puede ser influida por la cepa del parásito. preferentemente el lindano o gamexano al 1 %. En politransfundidos. Rev Med Chil 1988; 116: 1 t2-6.
Gota gruesa. Es también un procedimiento in­ Sobre los esquemas terapéuticos y las dosis, véa­ estos casos, el rociado debe alcanzar a todas las Larca M, González A, Reyes VE y cols. El diagnóstico de
dicado en la fase aguda de la infección. se el Capítulo 66: Tratamiento de las Parasitosis y viviendas del área y repetirse con regularidad. Sin la enfennedad de Chagas crónica mediante antígenos
Método de centrifugación de la sangre fresca Tablas Terapéuticas. Como en otras enfermedades embargo, cualquier acción antitriatómica debe ser recombinantes de T. cr11zi. Rev Med Chile 1993;
(método de Strout). Se utiliza sangre venosa total o infecciosas, se debe ser cauto en el uso de las drogas acompañada de una intensa educación sanitaria de 121:363-8.
el suero. Es un método para ser usado especialmen­ inmunosupresoras y de los corticoides en la enfer­ los campesinos, de los niños y del público en gene­ MoreU o A, Aldunate J, Repetto Y. Present status of Cha­
te en la fase final de la etapa aguda, cuando los medad de Chagas. ral, con el propósito de enseñar los peligros de la gas' disease chemiotherapy at the moleculal leve!. In:·
parásitos no son ya tan abundantes en la sangre. Mediante la administración de medicamentos se convivencia con esos insectos y crear actitudes des­ Ehrlich R, Nieto A. Biology of Parasitism. Montevi­
Xenodiagnóstico. Basado en la muy activa mul­ puede producir la detención de la infección provo­ favorables para su desarrollo en la vivienda y en sus deo, Uruguay: Ediciones Trilce, 1994.
tiplicación del T. cruzi en el tubo digestivo de los cada por T. cruzi y, probablemente, su erradicación, alrededores. Muñoz P, Thiennann E. Infecciones congénitas en toxo­
triatomas. El xenodiagnóstico, en el cual se utilizan pero estos medios terapéuticos no tienen acción so- plasmosis y enfermedad de Chagas. En: Alías A.
estados ninfales de triatominos, sirve para el diag­ bre las lesiones ya establecidas en el enfermo: En el Avances en las enfermedades parasitarias. Series
nóstico en la etapa aguda y crónica de la infección. caso de la cardiomiopatía con insuficienc¡a, debe BIBLIOGRAFIA Clínicas Soc Med Santiago 1988; 8 (4):59-74.
usarse la medicación propia de la insuficiencia car­ OMS. Control de enfennedad de Chagas. lnfonne de un
Diagnóstico parasitológico Indirecto. Es el diag­ díaca. En el megacolon se intentará la corrección Aguilera X, Apt W, Rodríguez J y cols. Eficacia del comité de expertos de la OMS. Serie de lnfonnes
nóstico inmunológico que pesquisa los anticuerpos quirúrgica, removiendo la porción colónica desfun­ control del vector de la enfennedad de Chagas de­ Técnicos Nº 811, Organización Mundial de la Salud,
en e_l presunto infectado chagásico. Las pruebas más cionalizada; muchos de estos casos llegan a los mostrada a través de la infección humana. Rev Med Ginebra, 1991.
usadas son las reacciones de ELISA, inmuno­ servicios de urgencia por fecalomas o por vólvulo Chil 1994; 122:259-64. Sánchez G, Zulantay L, Venegas I y cols. Treatment with
fluorescencia indirecta (IFI), hemaglutinación (HAI) del sigmoides, que obliga a una rápida solución qui­ Apt W, Reyes H. Algunos aspectos de la enfennedad de allopurinol and itraconazole changes lytic activity in
y fijación del complemento (FC) o reacción de rúrgica. En los grandes megaesófagos, con zona de Chagasen Latinoamérica. Parasitol al Dia 1990; 14:23- patients with chronic, low grade Trypanosoma cr11zi
Machado-Guerreiro. acalasia importante, se utilizan las dilataciones,pro-',,,. 40. infection. Trans Roy Soe Trap Med Hyg,1995; 89:438-
Las reacciones de ELISA e IFI son las más pre­ gresivas o el tratamiento quirúrgico con la operación Apt W, Aguilera X, Arribada A y cols. Tratamiento de la 9.
coces en detectar anticuerpos anti-T. cruzi. La HAI de Heller. enfennedad de Chagas humana crónica con itraconazol Schenone H, Contreras M, Borgoña JM y cols. Panorama
264� PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 29
general de la epidemiología de la enfennedad de Bull 1985; 41:187-94.
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TOXOPLASMOSIS
SchofieldCJ.Control ofChagas' disease vectors. Br Med Clin Microbio! Rev 1992; 5:400-19. ANTONIOATIAS yERICA THIERMANN

Definición. Infección parasitaria del hombre y de Al cabo de tres, cinco o más días, algunos merozoitos
diversas especies de mamíferos y de aves, producida evolucionan hácia formas sexuadas o gametos. El·
por un protozoo coccidio, el Toxoplasma gondii. En microgametocito masculino madura hasta producir
el hombre inmunocompetente, la toxoplasmosis ha­ entre 12 y 32 microgametos. La fecundación del
bitualmente es asintomática y las formas clínicas son macrogameto ocurre dentro de la célula hospedera y
variables y dependen del órgano o sistema donde se el cigoto resultante sale al instestino recubierto por
multiplica de preferencia el parásito. En el hombre una envoltura traslúcida, el ooquiste, que es expul­
inmunocomprometido puede provocar daños graves sado al exterior con las heces del gato (Figura29-3D
y mortales. y Lámina 23 ). El gato comienza a eliminar ooquistes
de tres a cinco días después de haberse infectado.
Biología Si la infección del gato ocurre con taquizoitos (inges­
tión de animales con infección aguda) o con
El Toxoplasma gondii es un protozoo del sub­ esporozoitos (ingestión de ooquistes), se produce
phylum Apicomplexa (Levine, 1 972) y de la subclase primero una infección tisular con taquizoitos, segui­
Coccidia (Leuckart, 1879). Está formado por dos fa­ da de la producción de bradizoitos capaces de iniciar
milias: la familiaEimeridae con los génerosEimeria el ciclo intestinal, con un período prepatente de vein­
e Isospora, y la familia Sarcocystidae, con los géne­ tiuno a cuárenta días.
ros Toxoplasma y Sarcocystis. Los ooquistes de T. gondii son eliminados en
El T. gondii deriva probablemente de un coccidio estado inmaduro y en condiciones adecuadas con­
intestinal monoxénico del gato, 'el cual durante su tinúan su desarrollo en el medio externo, formando
evolución produjo formas tisulares en este animal y en su interior dos esporoquistes con cuatro
posteriormente, en otros animales. El gato y otros esporozoitos cada uno.
felinos salvajes son los únicos animales en los cua­
les el parásito se multiplica, tanto en el intestino Ciclo tisular. En los tejidos de los mamíferos y
como en los tejidos. De allí que se distinga al gato de las aves (Figura 29-2) se puede observar al T.
como al hospedero completo o definitivo; en cambio, gondii como zoitos libres o en multiplicación endo­
los demás mamíferos, incluido el hombre y las aves, celulares (endozoitos) y formas enquistadas (quis­
se consideran como hospederos incompletos (en tozoitos) (Figura29-3 y Lámina 24).
ellos sólo se observa el ciclo de multiplicación tisular) Los zoitos libres tienen el típico aspecto
o intermediarios (el parásito sólo se multiplica por semilunar o en arco (de allí el nombre de toxoplasma:
c/clos asexuados o esquizogónicos). toxos =arco), con un polo anterior más aguzado, una
cara convexa y la otra generalmente cóncava. Miden
Ciclo intestinal. Si el gato se infecta p.or cami­ de 4 a 6 µm de largo y de 2 a 4 de ancho; es decir,
vorismo con quistes de T. gondii (Figura 29-1 ), los tienen aproximadamente el tamaño de un eritrocito.
'·��· parásitos penetran al epitelio de las vellosidades de Teñidos con Giemsa se les puede distinguir el núcleo
la porción baja del intestino delgado y una yez den­ rosado, de ubicación central o paracentral y el cito­
tro de las células, crecen adquiriendo un aspecto plasma coloreado de azul. Cuando se los observa
\ amiboide, el trofozoito, que pronto divide su núcleo con el microscopio electrónico, presentan una
y cada porción nuclear se rodea con una parte cito­ ultraestructura compleja (Figura29- 4).En el citoplas­
plasmática. Así queda constituido el esquizonte in­ ma se observa en su polo anterior, un anillo polar y
maduro, que luego madura hasta formar numerosos una formación cónica hueca, cuya base está dirigida
merozoitos. Es probable que esta fase esquizogónica hacia el interior del parásito. Corresponde al conoide,
sea precedida de otros mecanismos de reproducción el cual parece continuarse
asexuada, como son la endodiogenia y la endopo­ en los roptries, estructuras alargadas, cilindricas,
ligenia. La célula hospedera estalla y libera.los mes.: :: .. homogéneas y divergentes en dirección al centro del

J
rozoitos, lo que depende de la magnitud del inóculo. parásito. El conoide puede ser prominente y en
.
f•
266. PARASITOLOGIA MEDICA TOXOPLASMOSIS 267

·�a GAMETOGONIA (d)

FASE
MEROGONIA GAMOGONIA
FASE
INACTIVA
Si?
ACTIVA
(e)

INTESTINO DE GATO (e)


TEJIDOS DEL HOMBRE, HERBIVOROS Y CARNIVOROS
I
AMBIENTE !lºq�istes
141!/;t�s 1 (b) mmiidµros <r>
OQ41JÍSfoS
(a)
�sp-�tiiJa�9s
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�-:... HERBIVOROS HERBIVOROS GATO


CARNIVOROS CARNIVOROS

Figura 29-1. Ciclo evolutivo del Toxoplasma gondii en la fase intestinal. El gato adquiere la infección por ooquistes Figura 29-2. Ciclo evolutivo del Toxoplasma gondii en la fase tisular. También en los hospederos intermediarios
esporulados provenientes de heces del mismo gato (a), quistes ·contenidos en carnes y vísceras de animales infectados ) .(hombre, herbívoros y carnívoros) las formas infectantes son los ooquistes (a) (adquiridos por fecalismo de gato), quistes
(b) y por zoitos si llega a ingerir animales con infección aguda. En el intestino, el T. gondii realiza primero una tisulares (b) (adquiridos por carnivorismo) y zoitos libres en el caso del feto en la transmisión congénita.
reproducción merogónica con formación de merozoitos que se liberan al destruirse la célula epitelial, .se introducen en
otros enterocitos para repetir varias veces esta fase del ciclo (c); sigue luego la gametogonia (d) y la fertilización o
gamogonia (e) y la ulterior eliminación de ooquistes inmaduros (f) que inician la esporogonia (g) hasta culminar en los
ooquistes esporulados.

este caso, representar un organelo apropiado para Esta multiplicación ocurre en una vacuola parasitó­
perforar la membrana de la célula hospedera. Ade­ fora de la célula hospedera y se inicia por un proceso
más, en el citoplasma se distinguen mitocondrias, de brote interno o endogenia, que remata con la
granulaciones, fibras delgadas y el aparato de Gol­ formación de dos individuos hijos (endodiogenia),
gi. El núcleo, redondo u oval, es semicentral y está los cuales prosiguen su proliferanción en forma su­
algo desplazado hacia el polo posterior, tiene una cesiva, mediante este mismo mecanismo.
doble membrana y posee un nucléolo. La multiplicación intracelular acelerada de toxo­
Los toxoplasmas, para multiplicarse, deben pe­ plasmas (taq11izoitos), concluye con la formación
netrar obligadamente en una célula. Son capaces de de pse11doq11istes; es decir, de células hospederas
parasitar cualquier célula nucleada, pero de prefe­ repletas de parásitos. El proceso culmina con la
rencia se los encuentra en las células del sistema destrucción de estas células parasitadas y con la
retículo endotelial, en las del sistema nervioso cen­ liberación de nuevos zoitos, los cuales localmente,
tral y en las células musculares. La penetración ce­ en el mismo tejido, o a distancia, por vía hemática
lular puede ocurrir por movimientos propios del o linfática, se diseminan por todo el organismo,
parásito o por fagocitosis. La multiplicación intrace­ invadiendo nuevas células.
lular es compleja. Se trata de un proceso asexuado Si el ritmo de reproducción es más atenuado, el
en el cual los individuos hijos son formados en el proceso terminará con la formación de quistes. Los Figura 29-3. (A) Zoitos libres y endocelulares (pseudoquistes) en exudado peritoneal de ratón. (B) Zoitos libres en co',!e
seno de la célula materna antes de llegar a ser libres. parásitos de multiplicación lenta, quistozoitos obra- histológico de cerebro (caso del Dr. R. Céspedes). (C) Quistes en cerebro de ratón. (D) Ooquistes en heces de gato.
262 PARASITOLOG/A MEDICA TOXOPLASMOS/S 269

los 30 y 40 años de edad. Estas cifras varían de un diseminados en pastizales, establos, bodegas y gra­ ciales, los zoitos libres o incluidos en los leucocitos,
lugar a otro, lo que se atribuye a factores geográficos neros; a través de los quistes contenidos en carnes y son transportados a todos los órganos por la sangre
y climáticos, hábitos alimentarios, tipo de trabajo, a vísceras; y ocasionalmente, por taquizoitos al inge­ y la linfa, penetran en nuevas células y continúan su
la higiene ambiental y a la presencia de gatos in­ rir animales enfermos y por transmisión congénita. multiplicación. Las lesiones se deben a la destruc­
fectados. La tasa de prevalencia es relativamente Los quistes contenidos en la garne y en las vís­ ción de las células parasitadas por los endozoitos y
baja en los niños pequeños y aumenta en forma pau­ ceras son una fuente irnpQrtante de infección por a la reacción inflamatoria con linfocitos, monocitos
latina con la edad. carnivorisrno, para un gran: número de animales. y macrófagos; estas lesiones curan por fibrosis y, a
Aparato El gato y otros felinos son los eliminadores de
de Golghi
Roptries Estas formas del parásito conservan su inefectividad nivel del SNC, por gliosis. La sintornatología clínica
ooquistes, formas infectantes para otras especies de en el refrigerador (+ 4ºC) durante tres a cuatro de estas fases dependen de la intensidad de la infec­
Gránulos animales y hasta para el mismo gato. Además, estos semanas, pero los destruye la congelación prolonga­ ción y de la susceptibilidad de los tejidos invadidos.
osmófilos
felinos se infectan por quistes a través del carni­ da y la cocción. El hombre también puede infectarse En el hombre, corresponden en esta etapa los casos
vorisrno y, ocasionalmente, por taquizoitos al devo­ por el consumo de carne cruda o sernicocida y este de toxoplasrnosis generalizada, los cuales preferen­
Retículo rar pequeños animales con infección aguda. Un gato riesgo está relacionado con el índice de infección de temente son de tipo congénito, y las prirnoinfecciones
endoplas•
mático
infectado elimina ooquistes durante una a dos sema­ los animales de la región, especialmente de los cer­ en inrnunocornprornetidos.
nas y una sola deyección puede contener millones de dos y de las ovejas, y los hábitos culinarios de la Con la aparición y el aumento progresivo de las
ellos. Si estos elementos encuentran condiciones población humana. La carne del vacuno es de escasa defensas inmunitarias, los parásitos extracelulares
Mitocondrias favorables en el ambiente externo (agua, terreno importancia en este sentido. La transmisión del T. desaparecen de la sangre y de los tejidos y al mismo
húmedo, temperaturas de alrededor de 25ºC y sufi­ gondii por carnivorisrno es muy frecuente en los tiempo, se frena su multiplicación intracelular. Du­
Figura 29-4. Toxoplasma gondii. Esquema de su ultraes­ ciente oxígeno), alcanzan su estado_infectante en un países desarrollados, donde la primoinfección ocu­ rante esta etapa, en el individuo dotado de adecua­
tructura. lapso de uno a tres días. Los ooquistes esporulados rre preferentemente en adolescentes y adultos jóve­ das defensas inmunitarias se produce un equilibrio
son extremadamente resistentes a los desinfectantes nes. En París, donde se acostumbra a comer carne entre parásito y hospedero. Estas "formas de resis­
comunes y pueden permanecer viables por períodos sernicruda, el 80 y hasta el 90% de la población se tencia" pueden desarrollarse en cualquier órgano,
dizoitos, segregan precipitados granulares que se muy prolongados en un ambiente que les sea favo­ encuentra infectada con toxoplasrna. El alto porcen­ pero se encuentran con mayor frecuencia en el siste­
adosan a la membrana vacuolar circundante. Esta rable. Se ha demostrado una supervivencia de hasta taje de infección observado en los operarios que ma nervioso central y musculatura esquelética. En el
membrana se expande lentamente, a medida que se dos años en el agua y de más de seis meses en tierra trabajan en fábricas de cecinas y la mayor prevalen­ hombre, esta etapa corresponde a cuadros clínicos
multiplican en su interior los quistozoitos. Por últi­ húmeda. cia de la infección en las mujeres, se atribuye a la más localizados: encefalitis, afecciones oculares,
mo, al fusionarse las granulaciones, se forma una El ooquiste constituye el eslabón más importan­ costumbre de probar carnes crudas. linfoadenitis, neumonía intersticial, etcétera.
membrana sólida, la membrana quística. En este caso, te de la cadena epidemiológica del T. gondii. Sin La infección por formas libres o taquizoitos son Superadas las fases activas, la infección persiste
se trata de quistes verdaderos cuya membrana envol­ embargo, el riesgo de la infección humana por con­ accidentales y poco frecuentes, pero suelen ser las durante toda la vida. En los individuos portadores,
vente deriva de componentes del parásito y de la tacto directo con el gato no debe sobreestimarse, ya más graves. Estos estadios del parásito son muy se han observado secuelas de toxoplasrnosis en el
célula hospedera. Los quistes son de tamaño varia­ que esos animales eliminan ooquistes inmaduros sensibles a las influencias del ambiente externo, a ojo y en el cerebro, así corno la persistencia de los
ble, desde algunos µm y contienen en su interior por un período limitado y su reinfección sería ex­ los desinfectantes comunes y a la acción del jugo quistes en los tejidos sanos.
decenas, cientos o miles de quistozoitos. El quisto­ cepcional. El riesgo estaría dado más bien por la gástrico. La infección puede ocurrir a través de la La toxoplasrnosis crónica no siempre permanece
zoito es morfológicamente similar al endozoito. contaminación del ambiente con ooquistes, los fac­ sangre, por vía transplacentaria o por transfusiones latente. En el hombre, son posibles las reactivacio­
Para enfatizar la velocidad de reproducción del tores climáticos que permitan la sobrevida prolon­ repetidas, especialmente de leucocitos, en indivi­ nes debidas a la ruptura de los quistes. Estos fenó­
T. gondii en los tejidos, Frenkel ha propuesto llamar gada de las formas infectantes y aquellas condicio­ duos inmunocornprornetidos. Además, la infección menos pueden quedar limitados al mismo tejido o
taquizoitos a los parásitos de reproducción rápida nes de vida que favorecen las infecciones por feca­ se puede contraer por contacto directo con animales pueden ocasionar una reactivación generalizada.
dentro del pseudoquiste, y bradizoitos a los de re­ lismo. Esto explica que la transmisión del T. gondii intensamente infectados en la fase aguda. El quiste intacto no tiene trascendencia patoló­
producción lenta dentro de los quistes. Así, taqui­ ocurra preferentemente en poblaciones de nivel so­ De acuerdo con lo observado en forma experi­ gica. La ruptura de los quistes produce fenómenos
zoito es sinónimo de endozoito y bradizoito lo es de cioeconómico bajo, donde los niños se infectan a mental y en infecciones accidentales de laboratorio, de necrosis debido a factores inmunitarios y de hi­
quistozoito. temprana edad, corno se ha demostrado en países en la penetración del parásito se puede producir a tra­ persensibilidad retardada. Además, puede ocurrir
En suma, en los mamíferos y en las aves el toxo­ desarrollo. La infección humana por ooquistes esta­ vés de las mucosas, de las vías digestiva, respiratoria liberación de quistozoitos capaces de penetrar y mul­
plasrna se puede observar corno zoito libre, endozoito ría mediada por la tierra, fornites, agua de bebida, y conjuntiva] y de lesiones de la piel o mordeduras. tiplicarse en células adyacentes, provocando lesio­
o t¡iquizoito, y corno quistozoito o bradizoito (quis­ alimentos mal lavados, etc., y el riesgo de la disemi­ La toxoplasrnosis, endemia con morbilidad y nes especialmente a nivel del cerebro y de la retina.
tes). nación puede aumentar por artrópodos coprofilicos. mortalidad aparentemente bajas, no representaría un La importancia de la ruptura del quiste guardará
Por otra parte se ha demostrado que algunos roedo­ problema de salud pública, si no fuera por la trans­ relación con la reserva funcional del órgano com­
Epidemiología res al ingerir ooquistes, además de infectarse, po­ misión transplacentaria, fenómeno de gran enverga­ prometido previamente. Es a nivel de la retina y del
drían eliminar algunos de ellos intactos con sus dura y las infecciones oportunistas en pacientes in­ cerebro donde la ruptura quística tiene mayor im­
La toxoplasrnosis es la zoonosis parasitaria más heces, lo que aumentaría la fuente de infección. rnunocornprornetidos. portancia.
difundida en la naturaleza. Se ha demostrado en to­ Recientemente, se ha desarrollado una vacuna La evolución de la toxoplasrnosis no es uniforme
das las latitudes, tanto en poblaciones humanas corno antitoxoplasrna para gatos, la cual evitaría la pro­ Patología ni constante en las c!iversas especies de animales, ni
en más de trescientas especies de mamíferos domés­ ducción de ooquistes, lo que disminuiría la fuente la enfermedad es similar en todos los individuos
ticos y silvestres y en alrededor de treinta especies de infección para el hombre y otros animales. -----.._ La penetración del toxoplasrna por cualquier vía, infectados de una misma especie.
de aves de corral y silvestres. Las encuestas seroló­ ...Los hospederos intermediarios, aquellos en que , produce rápidamente una infección generalizada. Los El dinamismo del proceso infeccioso depende
gicas efectuadas en diferentes países, indican una el toxoplasrna realiza sólo el ciclo tisular, pueden procesos de multiplicación inicial determinan un de factores del hospedero y del parásito. De parte
infección del 40 al 50% de los adultos sanos entre adquirir la infección por medio de los ooquistes daño tisular localizado. A partir de estos focos ini- del hospedero, influyen la susceptibilidad a la infec-
l
270 PARAS!TOLOG!A MEDICA TOXOPLASMOS!S 271

ción y su capacidad defensiva inespecífica y espe­ Sintomatología de otros órganos es excepcional, pero hemos visto, alcohólica, tumor cerebral, encefalitis, absceso,
cífica. La infección tiene consecuencias más graves o se han descrito, miocarditis, encefalitis y miositis. encefalopatía hipertensiva, etc. Como secuela pue­
en el feto y en el niño; no se describen diferencias Se revisarán sucesivamente, la sintomatología Lo habitual es la curación clínica definitiva, pero de quedar algún daño psíquico e intelectual (véase
notables de susceptibilidad que dependan del sexo. de la toxoplasmosis adquirida tanto en el paciente se describen casos de reactivaciones, caracterizados el Capítulo 45: Parasitosis del sistema nervioso
Agravan la infección aquellos factores que inciden inmunocompetente como en el inmunocom­ por un nuevo crecimiento ganglionar, marcada aste­ central).
en las defensas inespecíficas o específicas del hos­ prometido, en la embarazada y en la transmisión nia y febrículas, coincidentes con un aumento de los
pedero como las enfermedades infecciosas (tuber­ congénita. anticuerpos específicos, tal como ocurrió en un pa­ Forma miocárdica. Si bien existe la miocardio­
culosis, malaria, inclusión citomegálica, etc.), neo­ ciente cuya evolución seguimos por más de quince patía toxoplásmica, no se sabe su verdadera inciden­
plasias (enfermedad de Hodgkin y otros linfomas), Toxoplasmosis adquirida años. cia. Es un cuadro clínico de rara observación. Hay
condiciones de estrés o tratamiento con inmuno­ El hemograma puede revelar cantidad normal de consenso para estimar que la miocarditis es una
depresores (corticoides y drogas antineoplásicas) El periodo de incubación, estimado por las infec­ leucocitos, leucocitosis leve o leucopenia; habitual­ manifestación de la infección toxoplásmica aguda y
y fundamentalmente en el SIDA. La deficiencia in­ ciones humanas de laboratorio, varia entre ocho y mente, se encuentra linfocitosis con linfocitos de generalizada, con localización del parásito en la fibra
munitaria de los pacientes con SIDA o tratados con veintiún días. La fase inicial o reciente, se caracteriza Downey y eosinofilia discreta; la serie roja es nor­ cardíaca y su ulterior daño e inflamación del inters­
drogas inmunosupresoras (neoplasias, trasplante por molestias vagas y mal definidas, entre las que mal. La reacción de Paul Bunnel es negativa. El ticio (véase Figura 4-6). Además, existiría la
de órganos, etc.),_predispone a la diseminación fatal destacan una profunda astenia, febriculas, cefalea, adenograma presenta una linfoadenitis inespecífica, miocardiopatía toxoplásmica monosintomátíca, con
en los casos de toxoplasmosis inicial o a la reacti- · eritema cutáneo fugaz, mialgias, artralgias, naúseas con una gran hiperplasia reticular, sin distorsión de compromiso exclusivo del corazón, la que es negada
vación de una infección latente. En estos casos, el y, ocasionalmente, diarrea. Este cuadro puede pro­ la estructura normal del ganglio, con eosinófilos y por algunos autores. (Véase el Capítulo 47: Parasi­
SNC es el más comprometido y le siguen, en fre­ longarse por una o más semanas. En raras ocasiones células plasmáticas; el hallazgo del parásito en el tosis del corazón).
cuencia, el corazón, lo.s pulmones y los ojos. Si esta se presenta en el adulto inmunocommpetente un adenograma es excepcional (véase Figura 4-5).
nueva situación iatrogénica estuviera presente en cuadro inicial fulminante, generalizado y fatal, con Forma pulmonar. El T. gondii debe ser reevalua­
El diagnóstico diferencial debe plantearse con
la mente de los médicos y se practicaran controles compromiso simultáneo de varios órganos o siste­ mononucleosis infecciosa, linfoadenitis tuberculosa, do como agente patógeno en el pulmón. En los úl­
serológicos adecuados en los pacientes, podrian mas. La fase reciente, que corresponde a una para­ linfomas y adenopatías provocadas por la hipersen­ timos años, fundamentalmente por el SIDA y por el
atenuarse sus efectos con un tratamiento antipara­ sitemia inicial, puede presentar diversas formas clí­ sibilidad a la hidantoína o a sus derivados. El diag­ empleo de drogas inmunosupresoras, ha aumentado
sitario adecuado. nicas, según el daño preferente en determinados la incidencia de la toxoplasmosis fatal y se han en­
nóstico se complementa con el estudio serológico,
En cuanto al parásito, el factor más importante órganos o sistemas: contrado con cierta frecuencia cuadros de neumonitis
por medio de la inoculación experimental de líquido
es su virulencia. Las cepas virulentas, debido a la en aquellos casos. La incidencia y el significado
ganglionar o biopsias de ganglio.

!
multiplicación rápida de los endozoitos, destruyen Forma linfoadenopática o ganglionar. Es la exacto de la neumonitis por toxoplasma todavía no
un gran número de células durante la fase inicial de más frecuente, la mejor estudiada y de más fácil se conoce, puesto que no en todos los casos se
Forma ocular. Una importante proporción (en­ diagnostica su etiología. La mayoría de los casos
la infección. En cambio, las cepas menos virulentas diagnóstico. Su cuadro clínico es semejante al de la tre el 35 y 50%) de todas las uveítis posteriores,
(o quistógeiJas) no son tan destructoras en la fase mononucleosis infecciosa. Tal vez la puerta de en­ descritos fueron observados durante la fase aguda
serian de causa toxoplásmica. El compromiso ocu­ de una toxoplasmosis sistémica o generalizada, don­
inicial y producen precoz y prolongadamente, quis­ trada más frecuente sea la orofaringea, por el com­ lar en la toxoplasmosis adquirida se presenta sólo
tes en los tejidos. La producción de quistes y los promiso casi infaltable de los ganglios cervicales. de puede constituir el cuadro dominante. Se trata de
excepcionalmente durante la fase aguda de la infec­ una neumonitis intersticial difusa, sin signos clíni­
mecanismos responsables de su reactivación consti­ Puede haber otros puntos de entrada, lo que se ción. La mayoría de los casos, especialmente los que cos ni radiológicos específicos. La incidencia y el
tuyen el problema más importante de la toxoplasmosis. advierte por el infarto de otros grupos ganglionares,
La mayoria de las infecciones humanas correspon­ ocurren en adolescentes, son atribuidos a una significado exacto de la neumonitis tqxoplásmica se
especialmente los mesentéricos. El cuadro comien­
den a cepas poco virulentas; sin embargo, estas reactivac ón · de una toxoplasmosis congénita; sin desconoce, debido a que no todos los casos son
za con una astenia muy marcada, anorexia, cefalea
cepas pueden causar un daño tan grave como las embargo,�el compromiso ocular también puede co­ diagnosticados.
y fiebre no muy elevada en un tercio de los casos,
virul.entas cuando el hospedero es muy susceptible, dolor abdominal y, rara vez, vómitos. Los ganglios rresponde a una manifestación tardía de una toxo­
como en el caso del feto. más comprometidos son los cervicales y le siguen plasmosis adquirida meses o años antes de detectar­ Forma muscular. Con cierta frecuencia se re­
. La inmunidad adquirida en la toxoplasmosis es los axilares, los inguinales y los mesentéricos (véase se el cuadro ocular. La forma adquirida se caracte­ gistran mialgias importantes, con disminución fran­
de tipo humoral y celular. Esta inmunidad no es Figura 4-5). El compromiso puede ser uni o bilate­ riza por una uveítis de tipo focal, generalmente uni­ ca de la capacidad funcional en pacientes con toxo­
completa, ya que la infección persiste en forma laten­ ral, afectar un ganglio único o grupos ganglionares, lateral, de localización yuxtapapilar o macular. Este plasmosis activa. En ellos, las biopsias musculares
ie, mientras se mantiene el equilibrio entre el parásito o manifestarse como una micropoliadenia generali­ proceso inflamatorio focal no es característico y debe revelan una miositis, con lesiones inflamatorias y
y el hospedero. Los anticuerpos humorales actúan zada. Los ganglios se palpan duros, no adheridos, no diferenciarse de las mútiples causas de uveitis. (Véase focos de necrosis en las fibras musculares y, en
sobre las formas libres en la sangre y en los líquidos supuran y, en la mitad de los enfermos, son doloro­ el Capítulo 46: Parasitosis oculares). Tal vez sea la ocasiones, la presencia del T. gondii (véase Figura
extracelulares. Además, las células linfoides actúan sos espontáneamente o a la palpación. Su tamaño localización ocular la única que permita al clínico 4-5). Además, se han descrito enfermos con derma­
sobre los macrófagos, entregándoles la inmunidad habitual es de uno dos centímetros de diámetro, seguir objetivamente la evolución clínica y el efecto tomiositis o pollmiositis con evidencias serológicas
específica mediante mecanismos todavía no esclare­ aunque puede haberlos mayores y menores. La del tratamiento en la to'xoplasmosis. de toxoplasmosis aguda; sin embargo, no se ha po­
cidos. La inmunidad aparece, primero en las vísceras esplenomegalia es rara. dido aclarar si el toxoplasma juega un rol patogé­
y más tarde a nivel del cerebro y del ojo. La toxoplasmosis ganglionar es de curso benigno. Forma meningoencefálica. El compromiso en­ nico importante en estos casos o se trata de primoin­
El otro mecanismo inmunológico observable en El tamaño de los ganglios disminuye hasta desaparecer cefálico no tiene una localización típica y los sín­ fecciones o reactivaciones toxoplásmicas en pacien­
la toxoplasmosis es la hipersensibilidad, la cual se ha después de algunas semanas o persiste como tomas van desde la cefalea, el letargo y la parálisis. tes sometidos a tratamientos con dosis elevadas de
demostrado en el hospedero sensibilizado específi­ micropoliadenia. Los síntomas generales pasan en pe­ facial, hasta las hemiparesias, la alteración profun­ corticoides. Si bien la información sobre este tema
camente y expuesto de nuevo al parásito. Esta con­ ríodo de uno .a dos meses, peró puede persistir una da de los reflejos y el coma. El LCR demuestra una es. escasa, se recomienda estudiar la posible exis­
siste en una intensa necrosis, acompañada de una astenia muy acentuada durante seis meses o más. En pleiocitosis y un aumento·de las proteínas. El diag­ tencia de una toxoplasmosis en pacientes con mio­
reacción inflamatoria. (Véase el Capítulo 5: Inmuno­ nuestra experiencia, la afección simultánea o sucesiva nóstico diferencial se debe establecer con psicosis sitis.
logía de las infecciones parasitarias).
272 PARAS/TOLOGIA MEDICA TOXOPLASMOS/S ·273

Toxoplasmosis en el inmunocomprometido .,. Toxoplasmosis de la embarazada preferible hacerlo en la segunda mitad del embara­
zo. En la toxoplasmosis el aborto terapéutico no se
El T. gandii constituye uno de los agentes opor­ Para que se produzca la toxoplasmosis congéni­ justifica en embarazadas con títulos serológicos in­
tunistas más importantes en los pacientes inmuno­ ta, la futura madre debe tener la primoinfección dicativos de una infección de varios meses de evo­
_comprometidos. En efecto, los pacientes con diver­ durante el embarazo o en el período inmediatamen­ lución. En las raras excepciones en que se tenga la
sos tipos de linfomas o sometidos a trasplante de te anterior a él. En la actualidad, se considera que seguridad de una infección reciente al comienzo del
órganos o a terapia antitumoral y principalmente con no habria transmisión congénita en embarazos su­ embarazo, con anticuerpos de tipo IgG en ascenso
el SIDA, están expuestos al desarrollo de una toxo­ cesivos en mujeres inmunocompetentes. En cam, con títulos de J: 16.000 o mayores y con anticuerpos
plasmosis grave. bio, en mujeres inmunocomprometidas se ha demos­ de tipo lgM a títulos significativos, debe considerar­
El riesgo de la infección es mayor y la gravedad
. .· trado transmisión congénita del T. gondii durante se esa posibilidad, ya que existe el riesgo de la trans­

�/:·
. '
de su desarrollo aumenta en aquellos pacientes que la fase crónica de la toxoplasmosis. La embarazada misión de la infección de un 1O a un 20% de los
no presentan anticuerpos antitoxoplasma y adquie­ VIH positiva y portadora de una toxoplasmosis cró­ casos.
ren el T. gondii a través de trasplante de un órgano nica, puede transmitir la infección al feto y en estos
infectado, los cuales, además, reciben tratamiento casos, se recomienda el control médico y serológico Toxoplasmosis congénita
inmunosupresor y transfusiones. tanto de la madre como del recién nacido.
Figura 29-5. Biopsia de cerebro: Quiste de Toxoplasma
Las primoinfecciones pueden causar cuadros La infección materna durante el embarazo rara De acuerdo con los conceptos antes citados, la
gondii en la corteza (Azul de toluidina magnificación
generalizados con compromiso multisistémico o en vez es sintomática y, en estos casos, asume la forma incidencia de la toxoplasmosis congénita seria di­
original x 1000) (Cortesía del Dr. Sergio Stagno, Dept.
un órgano, especialmente cerebro, pulmón y miocar­ de una linfoadenopatía o de molestias tan inespecí­ rectamente proporcional al número de mujeres que
Pediatrics, University of Alabama, Birmingham, USA).
dio. Las reactivaciones pueden deberse a la ruptura ficas como fiebre, astenia o dolores musculares. En se infecta con el T. gondii durante el embarazo. La
de quistes de T. gondii en un detenninado tejido estas infecciones con o sin sintomatología, ocurre frecuencia de dicho fenomeno depende de factores
(reactivación localizada) como ocurre principalmente siempre una parasitemia temporal, en la cual los epidemiológicos, tales como la proporción de muje­
en el cerebro, o a la diseminación generalizada de llos pacientes que presentan una deficiencia inmuni­ taquizoitos pueden traspasar la barrera placentaria e res no infectadas antes del embarazo y el riesgo de
parásitos por la sangre o la linfa, en el caso de una taria selectiva a nivel celular y en los cuales la evo­ infectar al nuevo ser. Sin embargo, según Desmont adquirir la infección. La toxoplasmosis materna ad­
reactivación producida en cualquierotro parénquima. lución de los anticuerpos sigue un curso normal. En y otros autores, sólo un tercio de las madres con quirida durante el embarazo, es pesquisable·median­
Las manifestaciones clínicas más frecuentes de cambio, en los casos con una inmunodeficiencia toxoplasmosis reciente llega a tener niños infectados te estudios serológicos seriados y el tratamiento de
la toxoplasmosis en pacientes inmunocomprometi­ combinada celular y humoral, se altera la produc­ y, de éstos, sólo un tercio presentaría síntomas al estos casos reduce el riesgo de la inft¡cción fetal. 1
dos son 'encefalitis, neumonitis y coriorretinitis. ción de anticuerpos y no se observa el aumento típi­ nacer. (Véase el Capítulo 57: Transmisión d_ongénita de I·

Respecto a la miocarditis, existe escasa información co de anticuerpos IgG ni aparición de IgM. En la mayoría de los casos, la transmisión se parásitos). La incidencia teórica de la iransmisión
.t

en el SIDA, lo cual llama la atención puesto que el El tratamiento de la encefalitis toxoplásmica produce al final de la gestación y, en estas circuns­ congénita varia de un país a otro; sin embargo, en la
miocardio es un órgano frecuentemente parasitado persigue las siguientes finalidades: a) tratamiento tancias, las infecciones de los niños son leves y sue­ actualidad se estima la incidencia de la toxoplasmo­
por el T. gondii. profiláctico en los pacientes asintomáticos seropo­ len manifestarse después del naci�io. En cam­ sis congénita, sobre la base de la experiencia clínica,
sitivos; b) tratamiento de ataque mediante dosis bio, el daño en el feto es severo si,1a infección con­ en uno a dos casos por mil nacimientos.
Encefalitis toxoplásmica. Constituye la causa elevadas de medicamentos, durante la fase aguda de génita sucede,,al comienzo del embarazo, lo cual es La mayoría de las infecciones congénitas son·
más frecuente del compromiso clínico del SNC en el la infección; y c) tratamiento de mantención, a dosis poco frecuente. asintomáticas en el momento del nacimiento (75 a
paciente con SIDA y es atribuida a la reactivación de bajas, de por vida. Mucho se ha discutido la relación entre el aborto 80%). Sin embargo, la casi totalidad de estos casos
una infección crónica. Su frecuencia depende de la y la toxoplasmosis. El peligro de este accidente que presentará secuelas durante su vida, principalmente
prevalencia de la infección toxoplásmica en la po­ Neumonitis. En algunos casos de SIDA, la neu­ puede ocurrir en el primer trimestre del embarazo, se oculares ( coriorretinitis) y del SNC.
blación y se estima que aproximadamente 25-50% monitis toxoplásmic_a es la infección oportunista limita a las infecciones maternas adquiridas recien­ La enfermedad manifiesta en el recién nacido es
de los enfermos con Sida que presentan anticuerpos inicial. Sus signos clínicos y radiológicos son ines­ temente y este fenómeno sucederia en forma esporá­ la menos frecuente, pero la más severa. Este aspecto
anti-T. gondii desarrollan la encefalitis toxoplásmica. pecíficos y variables y fácilmente se confunden con dica. De acuerdo con estos conceptos, en el aborto de la infección es el que ha creado la imagen de
La sintomatología no es específica y depende los producidos por Pneumocystis carinii, pero la habitual o repetido, la toxoplasmosis no tendria im­ gravedad de la toxoplasmosis congénita. Según Thal­
del número, localizaciones y tamaño de las lesiones imagen radiológica más frecuente es la neumonitis portancia. hammer, las manifestaciones clínicas en estos casos
del encéfalo. (Véase el Capítulo 45: Parasitosis del intersiticial difusa. Este compromiso pulmonar pue­ La mujer embarazada que ha sufrido una infec­ dependen entre otras causas, de la edad gestacional
Sistema Nen1ioso Central). El cuadro clínico tiene de formar parte de una infección generalizada o bien ción reciente requiere tratamiento antitoxoplásmico; en que se adquirió la infección:
un curso rápidamente fatal si no es tratado oportu­ constituir la manifestación única y predominante de no así las que sólo presentan títulos serológicos in­
namente. El diagnóstico es presuntivo, basado en la la infección y suele causar la muerte. El diagnóstico dicativos de infección prolongada o latente. Existen Infección generalizada. Corresponde a infec­
TAC, RNM y la serología. La confirmación diag­ etiológico se logra mediante la demostración del T. diversos criterios para elegir la edad gestacional ciones graves, ocurridas tardíamente durante el em­
nóstica se obtendría según la respuesta clínica y ra­ gondii en tejido pulmonar o en el lavado bronquial. propicia para la terapia con los medicamentos ac­ barazo. El niño nace con una infección generalizada
diológica después del tratamiento específico durante tualmente en uso: algunos proponen el tratamiento y su aspecto es el de un prematuro o niño inmaduro,
siete a catorce días. La biopsia cerebral sólo debiera Ocular. La toxoplasmosis seria la segunda cau­ en el momento del diagnóstico, sin importarles el con hepato y esplenomegalia y compromiso de otros
ser reservada para casos excepcionales, puesto que sa de retinitis (la primera es la infección por CMV) periodo del embarazo; otros, por la posible acción órganos: miocarditis, neumonía intersticial e icteri­
es un método invasivo y de resultados irregulares en los enfermos con SIDA. Las lesiones oculares teratogénica, se abstienen de indicarlo en el primer cia (síndrome de TORCH).
(Figura 29-5). El hallazgo del T. gondii también se suelen aparecer antes, durante o después de una trimestre. En Chile, durante años se ha tratado con En gener¡¡I, el aspecto del niño al nacer no difiere
puede hacer mediante PCR en aquellos casos ..que, :-:,:encefalitis toxoplásmica. Se trata de lesiones retina­ los medicamentos usuales a· embarazaaas con toxo­ . : mucho del observado en la enfermedad de Chagas
permitan obtener LCR. El estudio serológico para les extensas con grave deterioro de la agudeza vi­ plasmosis aguda en diferentes períodos de la gesta­ congénita, en la sífilis, en la enfermedad por inclu­
toxoplasmosis puede ayudar al diagnóstico en aque- sual. (Véase el Capítulo 46: Parasitosis oculares). ción, sin mayores complicaciones; sin embargo, es sión citomegálica, en las incompatibilidades san-

,I
274 PARASITOLOGIA MEDICA
TOXOPLASMOS/S 275

Métodos directos mite detectar anticuerpos de la fase inicial de la


infección. La RHA constituye una ayuda útil como
El hallazgo del T. gondii por revisión microscó­ técnica complementaría para el diagnóstico si se aplica
pica de muestras al fresco, frotis, cortes histológicos conjuntamente con otras pruebas y, además, presta
y su aislamiento mediante inoculación experimental gran utilidad en el control de las toxoplasmosis de
en ratones o cultivo de tejidos, constituye la prueba íarga evolución y en estudios seroepidemiológicos.
más fehaciente de la infección. Sin embargo, el reco­ Respecto a la reacción de fijación del complemen­
nocimiento de las formas libres y de los pseudo­ to (RFC) utilizada en el pasado, actualmente no se
quistes, que confirmarían la existencia de una infec­ le otorga importancia en el diagnóstico de la
ción aguda, es extremadamente dificil y no garantiza toxoplasmosis.
la obtención de un resultado específico. La demos­ Una técnica modificada de aglutinación directa
tración de quistes es menos engorrosa y sólo con­ (RAD) surgió junto al progreso en el reconocimiento
firmaría la infección, pero no ayudaría al diagnóstico de la toxoplasmosis en pacientes con SIDA. La RAD
de un caso agudo. La inoculación experimental en diferenciada se basa en el empleo selectivo de dos
ratones ofrece mayor posibilidad para demostrar el antígenos de membrana y su fijación en formol o
parásito, pero el procedimiento es complicado y len­ acetona, respectivamente. Se trata de una técnica
to, lo que reduce la importancia diagnóstica de la relativamente simple, de bajo costo y qué detecta las
prueba. El cultivo de tejidos empleando métodos infecciones toxoplásmicas agudas.
para el aislamiento de virus, constituiria una técnica La demostración de anticuerpos de clase IgM
más rápida para detectar el T. gondii. específicos para T. go11dii, de aparición precoz y
Actualmente se recomienda la aplicación de PCR limitada, caracteriza la fase inicial de la infección.
(Polymerase Chain Reaction) para demostrar el pa­ Para el estudio de IgM se ha empleado durante las
rásito en líquidos y tejidos. Este método que detecta últimas décadas, la reacción de inmunofluorescencia
fragmentos de ADN del T. gondii, constituye una indirecta (RIFI-IgM) la cual resulta positiva sólo en
herramienta rápida, sensible y específica para esta­ el 25% de las toxoplasmosis congénitas y que ha
blecer el diagnóstico de una toxoplasmosis aguda. sido reemplazada por técnicas de ELISA que al ser
Se ha empleado especialmente en inmunocomprome­ más sensible, permite pesquisar alrededor del 75%
tidos y Sida, observándose buenos resultados en de esas infecciones. Otra técnica recomendada para
Figura 29-6. Toxoplasmosis congénita. (A) Microcefalia, calcificaciones cerebrales, coriorretinitis y marcada deficien­ muestras de LCR, médula ósea, biopsia de tejidbs y la pesquisa de IgM es la !SAGA (Imnmnosorbent
cia mental. (B) Gran compromiso del Sistema Nervioso Central: convulsiones, nistagmus, hipertonia, opistótonos. sangre. La demostración de antígenos circulantes AgglutinationAssay) que combina las ventajas de la
tiene, en la práctica, poca aceptación. RAD con las de ELISA. Los mismos métodos se
emplean para la pesquisa de IgA e IgE específicos...
guíneas y en la sepsis del recién nacido. El diagnós­ que también sueÍe ser monosintomático, presentan­ Métodos indirectos El desarrollo de la biología molecular que permite
tico diferencial precoz es decisivo, porque permite do sólo coríorretinitis u otro signo. la preparación de antígenos monoclonales qué au­
el tratamiento en una fase en que aún e·s factible La mayoría de las secuelas se diagnostican du­ Se basan fundamentalmente en el hallazgo de mentan la especificidad y sensibilidad de las prue­
obtener una recuperación parcial o total del niño. rante períodos más tardíos de la vida (primera infan­ anticuerpos mediante procedimientos serológicos. bas, abre nuevos horizontes para el diagnóstico de
cia y adolescencia), cuando ya no responden al tra­ Sin embargo, la interpretación de los resultados se la toxoplasmosis. Sin embargo, la aplicación de esta
Encefalitis. Indica que la infección del feto ocu­ tamiento. Por estas razones, se recomienda pesqui- complica debido a la alta prevalencia de portadores tecnología avanzada, por el momento sólo está reser­
tTió en una etapa más precoz: la toxoplasmosis gene­ sar las infecciones toxoplasmáticas asintomáticas en crónicos en la población general. De modo que la vada a los laboratorios de investigación.
ralizada evolucionó en el útero y el niño nació en la los recién nacidos para poder tratarlas oportuna­ aplicación de la serología con fines de diagnóstico Los métodos inmunobiológicos proporcionan
etapa de la encefalitis. El aspecto del niño, de peso mente. (Véase el Capítulo 57: Transmisión co11gé- no se limita a detectar la infección, sino a dar una resultados específicos; sin embargo, para obtener
nonnal o subnonnal, es muy variado: hidrocefalia, 11ita de parásitos). información cuantitativa sobre el nivel de los resultados exactos, se considera importante trabajar
con macro o microcefalia, coriorretinitis, retardo anticuerpos de clase lgG y la aparición de anticuerpos con métodos estandarizados y controlar los antíge­
psicomotor y convulsiones (Figura 29-6B). Si no Diagnóstico lgM, lgA e IgE específicos. nos y reactivos de acuerdo con el suero patrón para
son tratados, la mayoría muere en el primer año de Las técnicas de predilección para la pesquisa de toxoplasmosis. Este concepto adquiere especial im­
vida. Los que sobreviven, suelen quedar con secue­ El diagnóstico de la toxoplasmosis no es fácil. lgG son aquellas que detectan tanto los anticuerpos portancia frente a la creciente oferta de kits comer­
las. Desgraciadamente, el diagnóstico, en esta etapa, Por tratarse de la parasitosis más diseminada en el que caracterizan la fase inicial de la infección (anti­ ciales.
es dificil y el tratamiento debe hacerse de inmediato mundo, la toxoplasmosis puede coexistir con otra cuerpos de membrana) como aquellos que aparecen El diagnóstico serológico de la toxoplasmosis no
para evitar las secuelas. enfennedad, sin relación de causa a efecto entre la más tardíamente y persisten en forma definitiva (an­ se limita a la pesquisa de la infección mediante un
parasitosis y la sintomatología del paciente. Resulta ticuerpos citoplasmáticos). Cumplen con estos re­ estudio cualitativo; su propósito fundamental con­
Secuelas. Se observa en niños que han cumplido muy dificil, si no imposible, establecer el diagnósti­ quisitos las reacciones de Sabin y Feldman (RSF), siste en dar información sobre la dinámica de los
las fases de generalización y encefalitis en la vida co sin ayuda del laboratorio, mediante métodos di­ inmuñofluorescencia indirecta (RIFI) y ELISA. Otra anticuerpos específicos, lo que permite apreciar la
jntrauterina. El aspecto del niño puede corresponder rectos que demuestren la presencia del parásito y técnica ampliamente utilizada es la reacción de evolución de la infección. La información serológica
a la típica tríada de Sabin: hidrocefalia, calcificacio­ métodos indirectos ·que detecten·anticuerpos especí­ hemaglutinación indirecta (RHA). Sin embargo, su aislada no,basta para establecer el diagnóstico, sal­
nes cerebrales y coriorretinitis (Figura 29-6A), aun- ficos. valor diagnóstico es limitado', puesto que el empleo vo cuando el título es extremadamente elevado
de extractos citoplasmáticos como antígeno, no per- (1/16.000 ó más) y/o se demuestra lgM específica a
276- PARASITOLOG/A MEDICA TOXOPLASMOSJS 277

título significativo. Se aconseja repetir las reaccio­ pre que el paciente presente lesiones características se observa el aumento típico de anticuerpos IgG ni en pacientes inmunocnmprometidos con toxoplas­
nes, con cierto intervalo, para deducir conclusiones al examen de fondo de ojos. Sin embargo, en ocasio­ aparición de IgM o existe negatividad total (casos mosis del SNC, donde alcanza un porcentaje de al­
útiles con respecto al grado de actividad y evolución nes se ha podido observar uaa relación directa entre de SlDA avanzado). Pese a estos inconvenientes, se rededor el 50%. En estos casos se reemplaza por
del proceso infeccioso, lo que ayuda a dilucidar si el la dinámica de los anticuerpos y la actividad de la recomienda aplicar las técnicas serológicas en estos clindamicina, cuya administración conjunta con piri­
T. gondii es el causante de la enfermedad en estudio lesión ocular. pacientes, tanto para detectar los portadores de una metamina ha dado excelentes resultados en el trata­
o si se trata de una simple infección concomitante. toxoplamosis crónica como para el diagnóstico etio­ miento inicial o de ataque contra la encefalitis toxo­
El problema es relativamente fácil durante la fase Toxoplasmosis en la embarazada inmunocom­ lógico de los casos sintomáticos. plásmica en pacientes con SIDA. Sin embargo, la
· inicial de la infección, donde existen caracteristicas 'petente. Una embarazada con resultado serológico En muchos pacientes con infección VIH, espe­ administración prolongada de clindamicina para el
serológicas bien definidas, suele haber síntomas clí­ positivo para lgG a títulos bajos o medianos (4-256) cialmente en aquellos con infección toxoplásmica tratamiento de mantención o profiláctico puede pro­
nicos aparentes y además existe mayor posibilidad persistentes, presenta una infección crónica latente primaria, se han observado anticuerpos elevados para ducir efectos secundarios importantes en estos pa­
para demostrar el parásito. que no constituye riesgo alguno con respecto a 1� \ IgG e incluso lgM positiva. El estudio de lgA no ha cientes.
El período de cronicidad latente también pre­ transmisión congénita y por lo tanto, no requiere proporcionado resultados alentadores en pacientes Entre los numerosos medicamentos ensayados
senta características serológicas definidas, pero la tratamiento. con SIDA y encefalitis toxoplásmica. Por otra parte, contra la toxoplasmosis en pacientes inmunocom­
inoculación experimental no tiene utilidad y clínica­ Si los anticuerpos lgG alcanzan niveles igual o la pesquisa de lgE con técnicas modernas podría prometidos, destacan la pirimetamina+ sulfadoxona
mente sólo puede haber secuelas. La interpretación superior a 1.000 se debe seguir el estudio serológico constituir una ayuda útil en estos casos. (Fansidar®), piremetamina+ dapsona (Maloprim®),
se complica en aquellos casos que se pesquisan du­ para lgG y agregarse el de la IgM e IgA para veri­ La demostración del parásito en muestras de y trhnetoprim + sulfametoxazol (Cotrimoxazol®).
rante las etapas intermedias de la infección, donde ficar la existencia de una infección toxoplásmica humores, tejido o sangre (mediante inoculación ex­ Este último fármaco ha demostrado cierta actividad
los resultados serológicos suelen ser menos diferen­ aguda. En estos casos, se considerará el tratamiento perimental, cultivo o PCR) podria tener mayor éxito en animales de experimentación y algunos autores
ciados, la sintomatologia es menos concluyente y la de la madre y debe ser estudiado el niño a partir de en estos pacientes que en los inmunocompetentes, , describen su utilidad como tratamiento profiláctico
demostración del parásito es muy dificil. su nacimiento para verificar si se produjo la transmi­ especialmente si se obtiene la muestra durante la en pacientes con SIDA; sin embargo, su real poder
El valor de las pruebas de laboratorio en situa­ sión trasplacentaria del T. gondii. fase aguda de la infección y antes de iniciarse la curativo o preventivo todavía no ha sido precisado.
ciones específicas, se demuestra en los siguientes terapia específica contra el T. gondii. La acción contra el T. gondii de las drogas antes
ejemplos: Toxoplasmosis congénita. Todo niño que nace mencionadas, se manifiesta contra los taquizoitos
con sospecha de toxoplasmosis, debe ser sometido a Tratamiento presentes durante la fase activa de la infección, pero
Toxoplasmosis adquirida en el paciente inmu­ controles serológicos prolongados. Un resultado no son capaces de impedir la formación de quistes ni
nocompetente. Un resultado negativo para IgG anti­ positivo para IgG obtenido en sangre de cordón, Como tratamiento de primera línea, se ha usado su reactivación. Sin embargo, el gran peligro en los
toxoplasma descarta la infección. La serología indi­ confirma la infección materna, pero no permite afir- durante décadas la acción combinada _de la pirime­ pa9ientes imnunocomprometidos es la persistencia
ca infección reciente cuando se observa: a) serocon­ mar que el niño se encuentre infectado, ya que los tamina y de sulfamidas, las que provocan un bloqueo de quistes viables durante la fase crónica y su even­
versión de negativo a positivo para lgG y además anticuerpos IgG de la madre son transmitidos pasi­ metabólico de la síntesis y utilización de los ácidos tual reactivación. Al respecto, se tiene mucha espe­
lgM positiva a título alto; b) valores ascendentes vamente al hijo. En estos casos adquiere especial fólico, folínico y paraaminobenzoico. Mientras la ranza con la atovacuona, una hidroxinaftoquinona
(dos diluciones) para RSF, RIFI, ELISA-IgG; y apa­ importancia la demostración de IgM específica para pirimetamina bloquea la conversión del ácido folínico usada contra la malaria, neumonía por Pneumocystis
rición de RHA positiva a título bajo. Durante la fase T. gondii con una técnica altamente sensible (EL!- · en ácido fólico, la sulfoterapia bloquea la síntesis del carinii y toxoplasmosis asociada al SIDA. Este me­
inicial de la infección, existe mayor posibilidad para \ ácido paraaminobenzoico. Estos fármacos actúan dicamento ha demostrado una marcada actividad
SA-lgM o ISAGA). Un resultado positivo para IgM
aislar toxoplasmas mediante inoculación experimen­ (a cualquier título) indica formación de anticuerpos sinérgicamente sobre las formas libres y los taqui­ contra los quistes de T. gondii y podría constituir la
tal o cultivo. fetales y por ende, infección congénita. Sin embar- zoitos de T. gondii, pero la membrana envolvente de base del tratamiento de la toxoplasmosis en los
En la fase subaguda, la serología puede presentar go, si se observa lgM positiva en madre e hijo, debe los quistes intactos impide la destrucción de los pacientes con SIDA.
persistencia de títulos relativamente elevados (igual descartarse la posibilidad de un pasaje de anticuer- bradizoitos contenidos en su interior. Si bien se han Los esquemas y duración del tratamiento de la
o mayor de 8.000) para lgG en todas las reacciones, pos maternos y repetir el examen en sangre del niño ensayado una infinidad de otros fármacos para el toxoplasmosis, medicamentos recomendados,
incluso en la RHA. La lgM resulta negativa en la en un plazo de I O días. Además, se aconseja inves- tratamiento ile la toxoplasmosis, no han demostrado posología y ritmo de administración, son muy varia­
mayoría de los casos; sin embargo, en el adulto in­ tigar si existen anticuerpos lgA, puesto que no todos superioridad en estudios experimentales, a los· obte­ dos y, por otra parte, dependen del estado inmunita­
fectado suele observarse lgM positiva a niveles ba­ los RN infectados presentan IgM _a niveles detec­ nidos con -la piremetamina o sulfas. rio de los pacientes. A continuación describiremos
jos y medianos por períodos prolongados. Por esta tables. Fehacientemente se ha demostrado la acción fa. algunos de estos esquemas, los cuales en ningún
razón, se recomienda el estudio de lgA. Los controles serológicos deben repetirse duran­ vorable del tratamiento con pirimetamina y sulfami­ modo son excluyentes de otros.
La fase crónica se caracteriza por la persistencia te el primer año de la vida. Un descenso progresivo das en pacientes inmunocompetentes e inmunocom­
de anticuerpos IgG a títulos bajos (4-64), lo que con de los anticuerpos lgG y su negativización total per­ prometidos; sin embargo, provocan variados efectos Pacientes in1111111ocompelentes
respecto a la toxoplasmosis, sólo indicaría secuelas mitirán descartar la existencia de una toxoplasmosis tóxicos que obligan a la búsqueda de fármacos alter­
(infección latente). congénita. nativos. Toxoplasmosis adquirida aguda:
En embarazadas se recomienda el uso de espira­ Pirimetamina 25 mg x 2 veces (niños: 1 mg/kg)
Toxoplasmosis ocular. Su diagnóstico es emi­ Toxoplasmosis en el paciente inmunocompro­ micina, macrólido que no tiene efectos tóxicos, aun­ x 7 días y 25 mg x 1 vez (niños: 1 mg/kg) x 21-28
nentemente clínico y la serología es menos conclu­ metido. El estudio serológico de la toxoplasmosis que es menos efectiva que la pirimetamina. Debido días.
yente. En la mayoría de los adultos, estos casos co­ puede ayudar al diagnóstico en aquellos pacientes a que alcanza una alta concentración en la placenta Sulfadiazina 2 • 4 g + (niños: 20 mg/kg) en 4
rresponden a una manifestación tardía de la infec­ que presentan una deficiencia inmunitaria selectiva y su capacidad de atravesarla, previene la placentitis, veces x 21-28 días.
ción por T. gondii y a menudo se acompañan de a nivel celular y en las cuales la evolución de los reduce el riesgo de la transmisión del T. gondii y
títulos bajos o medianos .(IgG). Los oftalmólogos.•_ -,.anti.cuerpos sigue un ' cutso·. normal. En cambio, en además, tiene una acción favorable ·· '-·· sabre
· "'"'"la· infec-
Toxoplasmosis ocular activa:
aceptan todo resultado serológico positivo (a cual­ los casos con una deficiencia combinada, celular y ción fetal." a) Igual que en toxoplasmosis adquirida activa+
quier título) como indicativo de toxoplasmosis, siem- humoral, se altera la producción de anticuerpos y no Las sulfamidas son mal toleradas principalmente corticoterapia.
PAl1ASITOLOGIA MEDICA TOXOPLASMOSIS 279

b) alternativo: clindamicina 2,4 g x 21-28 días, pirimetamina 50 mg + clindamicina 2,4 g repar­ deben observarse en las enteroparasitosis: lavado Dannemann B, Me Cutchan JA, lsraelski D, Antoniskis D
sola o en combinación con sulfas y corticoterapia. tidos en 4 dosis por 4-6 semanas. cuidadoso de las manos antes de comer, ingestión de y cols. Treatmentoftoxoplasmic encephalitis in paticnts
Se tratarán los pacientes con coriorretinitis ma­ verduras y frutas lavadas y peladas, control de basu­ with AIDS. Ano lnter Mcd 1992; 116:33-43.
cular activa, cualquiera sea el título de las reacciones Tratamiento profiláctico. Requieren tratamien­ ras, moscas y cucarachas, que pueden actuar como Desmonts G, C Ouvreur J, Thulliez PH. Toxoplasmose
serológicas positivas, y a los pacientes con corio­ to profiláctico los enfermos con SIDA y serología vectores mecánicos de la infección. congenitale. La Presse Medicale. 1990; 19:1445-9.
rretinitis y uveítis sin etiología, pero con serología positiva, y los pacientes inmunocomprometidos "cu­ Dutton GN. Toxoplasmic retinochoroiditis . A historical
indicativa de actividad toxoplásmica. rados" dan una toxoplasmosis aguda que alberga Evitar la infección con quistes. Como los quis­ review and current concepts. Ano Acad Medicine 1989;
quistes de T. gondii, susceptibles de reactivarse: tes del parásito se encuentran en las carnes y en las 18:214-21.
Toxoplasmosis activa en la embarazada: Pirimetamina 25-50 mg + sulfadiazina 3 g o vísceras, se aconseja evitar su ingestión cruda o Frenkel JI<.. Pathophysiology of toxoplasmosis. Parnsi­
a)pirimetamina + sulfamidas: contraindicadas en clindamicina 1,2 g. semicruda. tology Today 1988; 4:273-8.
la primera mitad del embarazo. Entre los numerosos fármacos ensayados en la Para prevenir la infección de los individuos in­ Frenkel JK. Transmission oftoxoplasmosis and the role of
b )espiramicina 2 -3 g diarios. profilaxis, destacan el Fansidar® (pirimetamina + munocomprometidos rigen los mismos conceptos ya immunity in limiting transmission and illness. J Am
- 3 semanas de tratamiento intercaladas con 2 sulfadoxona), pirimetamina + dapsona y trimetoprim mencionados con respecto a los riesgos de infección Vet Med Assoc 1990; 196:233-40.
semanas de descanso. + sulfametoxazol (cotrimoxazol), cuyo poder cura­ natural por ooquistes y quistes. Sin embargo, en estos Frenkel JK. Toxoplasmosis in human beíngs. J Am Vet
- tratamiento continuado hasta el parto. tivo y preventivo aún no ha sido precisado. casos existe, además, el peligro de una transmisión Med Assoc 1990; 196:240-8.
c)a partir de 141' a l 6u semanas de gestación: Probablemente, el futuro del tratamiento preven­ iatrogénica a través de transfusiones repetidas de Holliman RE, Hohnson JD, Gillespíe SH, Jolrnson MA y
piremetamina 25 mg + sulfadiazina 4 g en curas tivo radique en la aplicación de una droga que tenga sangre o elementos sanguíneos y por trasplante de cols. New methods in the diagnosis and management
de 2 semanas, descanso de 21- 28 días y: efecto sobre los quistes de T. gondii. Hasta ahora, se órganos infectados. Esto implica efectuar estudios ofcerebral toxoplasmosis associated with the acquired
- continuar con este esquema hasta el parto. han obtenido resultados satisfactorios con el ato­ serológicos para toxoplasmosis en los donantes, uti­ immu�e deficiency syndrome. J lnfect 1991; 22:281-
- alternar con espiramicina 2 g. vacuona, hidronaftoquinona que ha demostrado efec­ lizándose en lo posible, sólo aquellos con serología 5.
to terapéutico en la toxoplasmosis del paciente con negativa. Además, se aconseja practicar controles Johnson JD, Butcher PD, Savva D, Holliman RE. Appli­
Toxoplasmosis congénita con RN sintomático SIDA, en la malaria y en la neumonía por Pneumo­ serológicos seriados en los receptores inmunocom­ cation ofthe polymerase chain reaction to the diagno­
y/o IgM e IgA positivas: cystis carinii. prometidos, para poder controlar la posible evolu­ sis ofhuman toxoplasmosis. J Infect 1993; 26:147-58.
- Pirimetamina 0,5 - 1 mg/kg/día por 21 días y ción de primoinfecciones o reactivaciones. Leport C, Remington JS. Toxoplasmose au cours du SIDA.
sulfadiazina 50-100 mg/kg/dia dividido en 2 tomas Prevención Respecto al desarrollo de vacunas, hasta el pre­ Presse Med 1992; 21:1 I 65-71.
diarias por 21 días. Alternado con espiramicina 100 sente se han obtenido resultados promisorios, pero Luft BJ, RemingtonJS. Toxoplasmic encephalitis. J lnfect
mg/kg/día dividido en 2 tomas diarias por 30-45 La prevención debe centrarse en aquellos grupos falta todavía la experiencia necesaria para evaluar. Dis 1988; 157:1-6.
días. que presentan mayor susceptibilidad para desarro­ sus virtudes. Hasta ahora se han ensayado dos vacu­ Luft BJ, Hafner R, Korzun AH, Leport C y cols. Toxo­
Este tratamiento se repetirá 3-4 veces durante el llar la enfermedad por toxoplasma: fetos e inmuno­ nas a partir de cepas mutantes de T. gondii: la prime­ plasmic encephalitis in patients with the acquired
primer año de vida. Si se detectaran procesos infla­ comprometidos. ra provoca en el T. gondii una inhibición genética immunodeficiency syndrome. New Engl J Med 1993;
matorios activos (infección generalizada, coriorreti­ La infección congénita del recién nacido se pue­ para fonnar bradizoitos y quistes; y la segunda, evita 329:995-1000.
nitis o encefalitis activa con LCR alterado), agregar de prevenir a través de la pesquisa serológica de las la producción de quistes que se diseminan en la Nussenblatt RB, Belfort R. Ocular toxoplasmosis. JAMA
corticoterapia. embarazadas con toxoplasmosis reciente y su even­ naturaleza por las heces de los gatos. 1994; 271:304-7.
tual tratamiento, o evitando que las mujeres se infec­ Schnap L, Geaghan SM, Campagna A, Fahy J, Steiger D
Toxoplasmosis congénita con RN asintomáti­ ten durante el embarazo mediante una adecuada y cols. Toxop/asma go11dii Pneumonitis in patients
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espiramicina 100 mg/kg/dia dividida en 2 dosis en todas las embarazadas constituye un método en­ Atias A, Thiennann E. La encefalitis toxoplásmica en Thiennann E, Atías A, Lorca M. Apreciaciones sobre el
diarias. gorroso y de alto costo, que requiere de la organiza­ pacientes con el Síndrome de Inmunodeficiencia Ad­ riesgo relativo de transmisión de la toxoplasmosis por
b)A partir del tercer mes (y puede prolongarse ción de laboratorios regionales de �iagnóstico. La quirida (SIDA). Parasitol al Día 1992; 16:135-9. transfusión sanguinea. Parnsitol al Dia 1988; 12:81-3.
hasta el decimoquinto mes): pirimetamína 0,5-1,0 utilidad y factibilidad de este tipo de estudio es dis­ Beaman MH, Luft BJ, Remington JS. Prophylaxis for Thiennann E, Atias A, Lorca M. Toxoplasmosis ocular en
mg/kg/día + sulfadiazina 50-100 mg/kg/día, admi­ cutible y debe ser calculada, en cada país, de acuer- Toxoplasmosis in AIDS. Ann lnter Mcd 1992; 117: pacientes inmunocomprometidos y con síndrome de
nistrados cada dos, tres y hasta cuatro días en curas do con la magnitud que el problema clínico reviste 163-4. inmunodeficiencia adquirida (SIDA). (Revisión bi­
de 21 días. Este régimen de tratamiento se continua­ y las facilidades técnicas que se dispone. En este Choromanski L, Freyre A, Brown K, Popiel 1, Shibley G. bliográfica). Arch Chil Oftal 1994; 51:23-9.
rá hasta la negativizacíón total de la serología con­ sentido, resulta más sencillo y económico instruir a Safety aspects ofa vaccine for cats containing a Toxo­ Wong SY, Remington JS. Biology of Toxoplasma go11dii.
trolada mensualmente. las mujeres embarazadas que traten de evitar infec- , plasma go11dii mutant strain. J Euk Microbio! 1994; AIDS 1993. 7:299-316.
tarse por medio del fecalismo (ooquistes) o carni­ 41:8.
Pacientes inmunocomprometidos vorismo (quistes).

Fase aguda: Evitar la infección con ooquistes. Los ooquis­


a)Prímer día: pirimetamina l 00-200 mg + tes son diseminados por las heces de los gatos. La
sulfadiazina 6-8 g en 4 dosis. profilaxis individual debe tender a cuidar y alimen­
Por 4-6 semanas: pirimetamina 50-75 mg (ó 1- tar adecuadamente a los gatos del hogar, limpiar los
1,5 mg/kg/día) + sulfadiazina 100-150 sitios de sus deyecciones y evitar su contacto con la
mg/kg/día. mujer embarazada. Las medidas para evitar el con­
b)Si hubiera intolerancia por la sulfadiazina: tacto con las heces del gato son similares a las que
Capitulo 30 NEUMOC!STOSIS 281

NEUMOCISTOSIS 4

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RENZO TASSARA y JUAN CARLOS WElTZ

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Definición. Pneumocystis carinii es un microor­ otros protozoos que a Saccharomyces. Por otra par­
ganismo de clasificación incierta, ampliamente dise­ te, la comparación del ARN ribosomal ha perdido
minado en la naturaleza y que en el humano actúa validez puesto que Giardia duodena/is y Entamoe­

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exclusivamente como patógeno oportunista, afectan­ ba histolytica, protozoos típicos, también han mos­ �
do especialmente a pacientes con SIDA, pero tam­ trado similitud en su ARN-r , con el de hongos y
bién son destacables los pacientes hematooncológicos bacterias. 4 •··
y trasplantados de órganos, además de otros inmu­ Morfológicamente corresponde a un organismo �
nocomprometidos. Produce una neumopatía con se­ unicelular, eucaríonte, dificil de cultivar, lo. que ha
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vero compromiso intersticial y exudado alveolar complicado su estudio. En los análisis histológicos
espumoso, cuadro que sin tratamiento específico, se reconocen fundamentalmente dos formas evolu­
tiene una evolución fatal. Actualmente la profilaxis tivas. La más habitual es el quiste, redondeado u
primaria ha demostrado gran utilidad en su control. ovalado, con un diámetro de 5-8 µm (3-12,5 µm) y
que en su interior contiene hasta 8 cuerpos intraquís­ 2
Biología ticos ameboides o esporozoitos (1 a 2 µm de diáme­
tro) (Figura 30-1). El trofozoito es de menor tamaño Figura 30-2. Probable ciclo del Pneumocystis cari11ii. El quiste contiene 8 cuerpos intraquísticos haploides (1), los
Descrito ya en 1909 por Carlos Chagas en los (1-5 µm), pleomórfico y de pared más delgada que cuales se liberan del quiste roto (2), y se transfonnan en trofozoitos que luego de la cópula fonnan elementos diploides
pulmones de un ratón chagásico, creyendo ser una el quiste, se visualiza mejor con Giemsa, que tiñe su (fase sexuada) (3). El ciclo continúa con el prequiste (4), donde se fonnan los cuerpos intraquísticos haploides mediante
fonna evólutiva de T1ypa11osoma cruzi, su ayudante contenido a diferencia del quiste cuya cubierta capta dos sucesivas meíosis y una mitosis. Es posible que los trofozoitos liberados del quiste roto presenten fases de
Carini postuló que se trataría de un organismo dife­ mejor las tinciones argénticas (Gomori) y Azul de multiplicación asexuada mediante fisión binaria y/o endogenia (5), lo que aumentaría el número de individuos. (Basado
rente, lo que fue comprobado por Delanoi. Se le ortotoluidina. La superficie del trofozoito presenta en Matsumoto y Yoshida).
asignó importancia patógena sólo después de la Se­ prequeñas prolongaciones llamadas filopodios que
gunda Guerra Mundial en relación a brotes en niños no tendrían utilidad fagocítica ni de locomoción, Epidemiología carinii en la "vedette maligna" de esta entidad no­
severamente desnutridos de orfelinatos y en prema­ sino que más bien para el anclaje al alvéolo. sológica, por constituirse sino en la principal, en ..
turos. Posteriormente, se comunicaron casos espo­ En el ciclo evolutivo se han postulado fases de Por su amplia distribución en la naturaleza, se una de las mayores causas de morbimortalidad del
rádicos en pacientes hematooncológicos y luego en reproducción asexuada y sexuada, pero muchas eta­ presume que toda la población se ha infectado en paciente con SIDA.
prácticamente todo tipo de trasplantados de órga­ pas son aún poco claras o desconocidas (Figura 30- algún momento con P. carinii. Estudios serológicos En USA se ha estimado que el 60 a 80% de los
nos. Pero con la aparición del SIDA en el inicio de 2). La adquisición de la infección sería a través de la demuestran que la mayor parte de las personas ya · pacientes con SIDA, presentará en algún momento
la década de 1980, adquiere su máxima importancia, inhalación de quistes, que estarían ampliamente di­ adquieren anticuerpos anti-P. carinii en los prime­ de su evolución una neumocistosis; sin embargo,
constituyéndose en la principal complicación y cau­ seminados en la naturaleza, pero sólo continuarían el ros años de vida, pudiendo haber evolucionado como esta cifra está en vías de disminución debido a la
sa de mortalidad en estos pacientes. ciclo aquellos que son inhalados por individuos cuyo una infección respiratoria autolimitada o simplemente precocidad del diagnóstico de la condición de por­
Su taxonomía y árbol filogenético aún son incier­ sistema inmune está severamente alterado. asintomática. tador del virus de inmunodeficiencia adquirida (VIH)
tos. Históricamente se han dado argumentos para El P. carinii afecta a numerosas especies vivien­ y la instauración de profilaxis farmacológica pri­
incluirlo tanto dentro de los protozoos como de los tes pero se ha observado que existen diferencias an­ maria para P. carinii en todo paciente VIH (+) cuyo
hongos. A favor del primer grupo, se encuentran las tigénicas y de ácidos nucleicos en los Pneumocystis recuento de CD4 es igual o inferior a 200 cels/mm3•
características morfológicas y respuesta favorable a detectados en cada especie. En los pacientes pediátricos con SIDA también es
antiprotozoarios, además de su falta de desarrollo Los primeros casos humanos fueron comunica­ una temida complicación debido a la precocidad de
en cultivos para hongos y su nula susceptibilidad a -····, dos en 1942 por Van der Meer y Berg en dos niños. aparición y alta mortalidad, por lo que se han desa­
la anfotericina. A favor de los hongos, se encuentra Después de la Segunda Guerra Mundial se comuni­ rrollado normas de profilaxis primaria que se deben
su afinidad por las tinciones argénticas, carencia de caron casos con características epidémicas en niños iniciar desde el primer mes de vida en todo hijo de
algunas estructuras presentes en protozoos y más desnutridos y prematuros. En los años siguientes, la mujer VIH (+). La frecuencia de neumocistosis di­
recientemente algunas publicaciones que comparan F···. mayoría de los afectados correspondía a portadores fiere de un país o continente a otro, observándose
su ARN ribosomal con el de algunos hongos del de leucemia y linfomas, inmunodeficiencias prima­ cifras notoriamente inferiores en Africa, con res­
género Saccharomyces. Estos estudios genéticos rias y trasplantados de órganos. A partir de la década pecto a USA o Europa. Sin embargo, estas discor­
parecían ser detenninantes para definirlo como hon­ del 80, el aumento inusual de casos de neumocistosis dancias parecieran estar relacionadas a un proble­
go; sin embargo, estudios .posteriores del ARN :., Figurn-30-1. Quistes de Pne11111ocystis cari11ii en frotis fue detenninante en la sospecha de la existencia .y ma de diagnóstico más que a diferencias de cepas,
ribosomal también lo muestran más relacionado con teñido con azul de Toluidina ( I.000x). posterior identificación del Sí'ndrome de Inmunode­ causas ambientales, susceptibilidad, etcétera.
ficiencia Adquirida (SIDA), convirtiéndose el P. En los pacientes hematooncológicos y trasplan-

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282 PARASITOLOGIA MEDICA NEUMOCISTOSIS 283

lados de órganos sigue siendo una temida complica­ sionalmente, en pacientes con SIDA se ha descrito Diagnóstico ministrar un mucolítico, nebulizar con solución sa­
ción, pero su frecuencia se ha minimizado gracias a en relación aP. carinii compromiso pulmonar atípico lina y efectuar kinesiterapia respiratoria para la ob­
la inclusión de la profilaxis primaria en los protocolos como zonas de necrosis y cavitaciones, lesiones Como la neumocistosis es una infección exclusi­ tención de una mejor muestra. La espectoración
específicos de tratamientos. Se han comunicado al­ granulomatosas y derrame pleural, pero se debe re­ vamente oportunista, los antecedentes del paciente simple presenta una muy baja sensibilidad y las
gunos casos de neumocistosis en pacientes aparen­ cordar que estos pacientes muchas veces evolu­ cobran especial importancia en la sospecha del diag­ biopsias percutáneas o por toracotomia actualmente
temente no inmunocomprometidos, pero en su ma­ cionan con otras infecciones asociadas simultánea­ nóstico. La neumocistosis siempre debe plantearse se ralizan sólo en forma excepcional. En niños que
yoría corresponden a individuos de avanzada edad mente. como diagnóstico presuntivo cuando nos enfrenta­ no espectoran, ha mostrado utilidad una variante de
y que padecen múltiples patologías severas como · Se ha comunicado un creciente número de casos mos a un .cuadro respiratorio, en un paciente con la espectoración asistida, en la. qu� la preparación
diabetes e insuficiencia cardíaca, o estaban someti­ de compromiso extrapulmonar,la mayoría de ellos en cualquier tipo de inmunocompromiso o con antece­ del paciente es igual, pero la muestra se obtiene por
dos a corticoterapia. pacientes con SIDA. Si bien este hecho no es aún dentes que nos hagan sospechar SIDA, por lo que se aspiración faringotraqueal o nasotraqueal.
significativo dentro del total de neumocistosis, pa­ debe indagar en relación a conductas sexuales, pro­ Las tinciones de elección para contrastar la pa­
Patología reciera ser un fenómeno en aumento y se ha sugerido miscuidad,drogadicción,transfusiones y anteceden­ red quística son la metenamina de plata y el azul de
su relación con la profilaxis vía inhalatoria. Los tes familiares. ortotoluidina. El contenido del quiste y trofozoitos
Muchos de los eventos patogénicos aún no son parénquimas afectados incluyen nódulos linfáticos, En sentido inverso, la sospecha o confirmación se contrastan preferentemente con Giemsa y Gram.
bien conocidos. El cuadro se iniciaría con la inhala­ piel, retina, coroides, hígado, bazo, médula ósea, de una neumocistosis en un paciente sin anteceden­ Por la "inestabilidad" (variabilidad) de las tinciones,
ción de quistes de P. carinii por parte de un indivi­ tiroides,intestino,músculo, riñón y casos disemina­ tes mórbidos significativos, obliga a estudiar VIH. se recomienda la implementación de dos de ellas y
duo inmunocomprometido y no por la reactivación dos. Nos referiremos separadamente a los exámenes el uso de controles positivos. También se han em­
de una infección crónica-latente. Aún no hay claridad con respecto a los mecanis­ generales que contribuyen al diagnóstico y a las téc­ pleado con efectividad, anticuerpos monoclonales
En el interior del alvéolo,P. carinii prolifera en su mos defensivos involucrados, pero tanto la inmuni­ nicas confirmatorias. marcados con fluoresceína, pero tienen un costo
forma trofozoítica,la que parece asociarse preferen­ dad celular como la humoral,juegan un rol importan­ muy elevado para su uso rutinario. Lo mismo ha
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temente al neumocito tipo I, unión que es deletérea te. En el SIDA, la aparición de la neumocistosis se Exámenes generales. La radiografía de tórax ocurrido más recientemente con la reacción de
para esta célula. Se ha sugerido que la fibronectina correlaciona con la depleción progresiva de los lin­ característicamente muestra un infiltrado bilateral polimerasa en cadena. Ambas parecieran ser las
jugaría un rol en la unión específica. El neumocito focitos - T CD4 y también se han comunicado neu­ algodonoso, que se va intensificando y evolucio­ técnicas de elección en un futuro cercano. Los cul­
tipo II también pareciera ser afectado y reacciona mocistosis en portadores de hipo o agammaglo­ nando a parches más condensantes. Sin embargo, tivos de P. carinii humano no han mostrado éxito y
proliferando. La descamación persistente de las pa­ bulinemia. La acción de los neutrófilos no pareciera se han descrito muchas variantes atipicas, especial­ la serología tampoco es útil, puesto que la mayoría
redes álveolares afectadas,la proliferación de trofo­ ser de importancia en esta infección. mente en pacientes con SIDA, como compromiso de la población sana tiene anticuerpos contra P.
zoitos,fQrmación de quistes,reacción del hospedero unilateral, condensaciones, nódulos, broncograma, carinii, mientras que el inmunocomprometido fre­
al daño tisular con células inflamatorias y exudado Sintomatología cavilaciones, neumotórax y derrame. Los pacientes cuentemente presenta depresión o ausencia de la
proteináceo, llevan a que se forme un relleno espu­ con profilaxis inhalatoria con pentamidina, pueden respuesta humoral.
moso característico en los alvéolos. Al avanzar el Las características del cuadro clínico dependerán presentar compromiso apical, ya que el aerosol no
cuadro, este relleno se va condensando y va obstru­ del tipo y severidad de la inmunosupresión. Un he­ logra· una buena llegada a esa zona. Se han usado Tratamiento
yendo los bronquiolos más finos. Por otra parte, cho relevante en la neumocistosis es que habitual­ otras técnicas no específicas que también han mos­
además de este compromiso alveolar,se produce un mente la severidad del compromiso respiratorio y trado utilidad como la impregnación con Galio-67, La neumopatía producida por el P. carinii, sin
engrosamiento del intersticio pulmonar por la hiper­ clínico contrastan con la pobreza de la signología gasimetría, DTPA, VEFI/CVF, etc. La cuantifi­ tratamiento específico,tiene una mortalidad cercana
plasia e hipertrofia de los neumocitos tipo II y por la auscultatoria pulmonar. cación de los niveles de deshidrogenasa láctica,. al 100% de los casos. En la década del 60,el isotianato
infiltración de linfocitos y células plasmáticas, ade­ Los signos más frecuentes son tos seca no pro­ parecieran ser útiles tanto para apoyar el diagnós­ de pentamidina mejoró notablemente el pronóstico
más del edema de los tabiques interalveolares (Figu­ ductiva, fiebre de intensidad variable, disnea de ca­ tico como para sugerir un peor pronóstico, mientras pese a la frecuencia y variedad de efectos adversos.
ra 30-3). Este engrosamiento puede ser en varias rácter progresivo, cianosis, baja de peso y dolor más elevados se encuentren. Luego en la década del 70, se observó la utilidad de
veces el grosor normal, lo que sumado al relleno torácico. la asociación de trimetoprim - sulfametoxazol (cotri­
alveolar progresivo,imposibilitan la hematosis. Oca- Los estertores y espectoración aparecen sólo en Exámenes específicos. Se refieren a las técnicas moxazol). Se han comunicado numerosos estudios
el 20 a 30% de los casos. Los pacientes hematoon­ confimmtorias o de certeza. Algunas de ellas son comparativos entre estos medicamentos y hasta la
cológicos presentan neumonía por P. carinii gene­ evidentemente invasivas,pero están plenamente jus­ fecha muestran similar eficacia,presentando ambos,
ralmente entre los 30 y 100 días después del inicio de tificadas, ya que la gama de microoorganismos in­ efectos colaterales de alta frecuencia; sin embargar
la quimioterapia,tiempo necesario aparentemente para cluidos en el diagnóstico diferencial es amplia.y los serian más tolerables y algo menos frecuentes con
que la cantidad de P. carinii sea suficiente para tratamientos, además de ser específicos para cada cotrimoxazol, constituyéndose actualmente como el
producir enfermedad. Sin embargo, una vez iniciada caso, involucran dosis elevadas y efectos adversos medicamento de elección para la mayoría de los
la enfermedad ea ese grupo de pacientes, tanto la variados y frecuentes, algunos de ellos de significa­ centros tanto en el tratamiento como en la profilaxis
evolución como el agravamiento clínico son bastan­ tiva severidad,por lo que no es aconsejable el trata­ de P. carinii.
te más abruptos (pocos días) que lo observado his­ miento empírico (tentativo) a menos que no exista El cotrimoxazol se usa en dosis de 75-100 mg/kg/
tóricamente en niños con desnutrición calori­ alternativa. Actualmente la técnica de elección es la día de sulfametoxazol (o 15-20 mg/kg/día de trime­
coproteica severa y actualmente, en portadores de fibrobroncoscopia con lavado broncoalveolar, con toprim), vía oral o ev dividido en 3 a 4 veces al día.
SIDA,donde el inicio del cuadro es larvado y lenta­ rendimientos sobre el 90% en centros experimenta­ El isotianato de pentamidina se administra en dosis
mente progresivo a lo largo de semanas e incluso, dos. Otras técnicas de menor utilidad son la expec­ de 4 mg/kg/día, vía im o ev, en dosis única.
Figura 30-3. Neumonía por Pneumocystis carinii. Engro­ períodos mayores .al. m�ª,..i;on tos y, disnea que se toración asistida con rendimientos del orden del 50 Los: efectos adversos de estos medicamentos se
samiento de los tabiques interalveolares; relleno alveolar van acrecentando paulatinamente, hasta llegar a la hasta 70%. Se realiza hidratando al paciente para observan con mayor frecuencia en los pacientes con
con exudado espumoso. insuficiencia respiratoria. fluidificar secreciones. Se recomienda, además, ad- SIDA que en los portadores de otras patologías y
PARASITOLOGIA MEDICA NEUMOC/STOS!S 285

más habitualmente a partir del final de la primera cistosis, corno de otras infecciones, especialmente 1995; 14:122-6. italian PCP group. J Infect 1996; 32:123-31.
semana de tratamiento. bacterianas. Hughes WT. Tite role of atovaquone tablets in treating Seah AJ, Hoover DR, Peng Y y cols. Predictors for failure
El cotrimoxazol se asocia a reacciones cutáneas, En el SIDA, la quimioprofilaxis ha mostrado re­ Pneumocyslis carinii pneumonia. J Acquir lmmune of Pneumocyslis carinii pneumonia prophylaxis.
fiebre, leuco y trombopenia, hiponatremia y altera­ sultados categóricos en la disminución de la neumo­ Defic S Hum Retrovirol 1995; 8:247-52. Multicenter AIDS cohort study. JAMA 1995;
ción de las enzimas hepáticas; sin embargo, no siem­ cistosis en pacientes adultos y pediátricos, tanto Kennedy C, Bidwell M. Atypical roentgenographic 273:1197-202.
pre es necesario discontinuar el tratamiento y cam­ en su frecuencia como enfermedad indicadora de manifestations of Pneumocystis carinii pneumonia. Safrin S, Finlkestein D, Feinberg J, Frane P, Simpson G,
biar a otro medicamento. Se han comunicado algu­ SIDA, como de morbirnortalidad. En adultos con Arch Intem Med 1992; 152:1390-8. Wu A et col. Comparison of three regimens far treat­
nos esquemas de desensibilización rápida y el uso SIDA se ha establecido que la profilaxis se debe Korroa H, Saadeh C. Options in the management of ment of mild to moderate Pneumocystis cari11ii pneu­
de corticoides asociados, para el control de las ma­ iniciar cuando el recuento de los linfocitos pneumonia caused byPneumocyslis carinii in patients monia in patients with AIDS. A double blind, rand­
nifestaciones cutáneas. ayudadores (CD4) sea menor o igual a 200 cels/rnrn3• with acquired immune deficicency sindrome and omized tria! of oral trimetoprim-sulfamethoxazole,
Con pentamidina los efectos adversos son en Sin embargo, en los hijos de mujeres con infección intolerance to trimethoprim/sulfamethoxazole. South dapsone-trimethoprim, and clindamycin-primaquine.
general de mayor frecuencia e intensidad: hipo e por el virus de inmunodeficiencia humana, la apa­ Med J 1996; 89:272-7. ACTG 108 Study Group. Ann Intem Med _1996;
hiperglicemia, hipo e hipertensión, leucopenia, insu­ rición de la neurnocistosis no siempre guarda rela­ Latouche S, Ortona E, Mazars E y cols. Biodiversity of 124:792-802.
ficiencia renal tubular (reversible), alteración de las ción con la disminución de los linfocitos CD4, puesto P11e11111ocystis corinii hominis: typing with different Saukkonen K, Garland R, Koziel H. Aerolized pentamidine
enzimas hepáticas y con menor frecuencia, arritmias, que la cifra normal de éstos, en el niño, es muy DNA regions. J Clin Microbiol 1997; 35:383-7. as altemative primary prophylaxys against Pneumo­
alteraciones neurológicas y muerte súbita. La vía im superior a la del adulto. Por ello, la quimioprofilaxis Leibovitz E, Pollack H, Moore T y cols. Comparison of cystis cari11ii pneumonia in adult hepatic. Chest 1996;
se asocia a dolor local y abscesos estériles. se recomienda desde el mes de vida, aunque no está "¡' PCR and standard cytological staining for detection of 109:1250-5.
Debido a los problemas terapéuticos expuestos clarificado aún si el recién nacido está o no infec­
l
Pneumocystis carinii from respiratory specimen from Sepkowitz K. Pneumocyslis carinii pneumonia in patients
se ha buscado exhaustivamente terapias alternati­ tado con el virus. patients with or at high risk for infection by human without AIDS. Clin Inf Dis 1993;17:5416-22.
vas. Entre las más primisorias están la Dapsona® Inicialmente se usó la pentamidina parenteral una immunodeficiency virus. J Clin Microbio! 1995; Simonds RJ, Lindegren ML, Thomas P y cols. Prophylaxis
(diarninodifenilsulfona) y la Atovaquona® (hidroxi­ vez al mes, observándose con el tiempo que la vía 33:3004-7. against Pneumocystis carinii pneumonia among chil­
naftoquinona), ambos con una efectividad acepta­ inhalatoria era igualmente efectiva y con menos efec­ Momin F, Chandrasekar PH. Antimicrobial prophylaxis dren with perinatally acquired human immunode­
ble y de mejor tolerancia. Otros medicamentos, con tos adversos. Pareciera sí, haber un creciente núme­ in bone marrow transplantation. Am Intem Med 1995; ficiency virus infection in the United States. N Eng J
efecto contra P. carinii son pirirnetamina asociada ro de casos de neumocistosis extrapulmonar en re­ 123:205-15. Med 1995; 332:786-90.
a sulfas, trimetrexato, clindamicina, difluorometilor­ lación al uso de pentamidina inhalatoria. Posterior­ Rizzardi GP, Lazzarin A, Musicco M y cols. Risks and Vasquez J, Simulian AG, Finke MJ, Cushion MT. Antigenic
nitina y primaquina. En los casos de neurnocistosis mente se ha comunicado repetidamente que el benefit of aerosolized pentamidine and cotrimoxazole differences associated witl1 genetically distinct P11eu1110-
graves· se ha comunicado la utilidad de asociar cotrimoxazol trisemanal en dosis habituales (trime­ in primary prophylaxis of Pneumocyslis carinii cystis carinii from rats. Infect Immun 1996; 64:290-7.
metilprednisolona al tratamiento específico, para dis­ toprim 5-6 rng/kg/día o sulfametoxazol 25 rng/kg/día) pneumonia in HIV-1 infected patients: a two years Yoshikawa H, Morioka H, Yoshida Y. Freeze fracture
minuir el componente inflamatorio pulmonar y las tiene igual eficacia, con las ventajas adicionales de italian multicentric randomized controlled tria!. The studies on Pneumocystis carinii. Parasitol Res 1987;
reacciones de hipersensibilidad al trimetoprim­ una mejor tolerancia, un costo notoriamente inferior, 73:132-9.
sulfarnetoxazol, favoreciendo la evolución y contribuye a prevenir otras infecciones, entre ellas,
las reactivaciones de toxoplasmosis cerebral. La
Prevención Dapsona® también se ha mostrado comparable al
cotrimoxazol, sin embargo, las dosis y esquemas aún
Debido a la toxicidad de la terapia anti P. carinii, no han sido bien establecidas, al igual que con
tanto por las características propias de los fárma­ Atovaé¡uona®.
cos, como por las altas dosis requeridas con algu­
nos de ellos, el ideal es la prevención de la
neumocistosis en los pacientes que estén en riesgo BIBLIOGRAF1A
de presentarla. Entre ellos, son destacables de men­
cionar algunas inmunodeficiencias primarias, fun­ Beur T, Erirg S, Hasper E, Rockstroh JK. Predicting in
damentalmente las de tipo celular y combinada; los hospital outcome in HIV associated Pneumocystis
trasplantados de órganos, incluidos los de médula; cariniipneumonia. Infection 1995; 23:272-7.
los pacientes hematooncológicos en quimioterapia; Cbary-Ready S, Graves_QC. ldentification of extrapul­
todo aquel con tratamientos corticoida!es e inmu­ monaryPneumocystis carinii in immunocompromised
nosupresores prolongados y especialmente, el gru­ rats by PCR. J Clin Microbio! 1996; 7:1660-5.
po de mayor relevancia que es el de los pacientes Gallant JE, Me Avinue SM, Moore RD y cols. Toe impact
con SIDA. of prophylaxis on outcome and resource utilization in
En los estados de inmunosupresión transitoria Pneumocystis carinii pneumonia. Ches! 1995;
como el que presentan los pacientes hematoonco­ 107:1018-23.
lógicos durante la quimioterapia o tratamientos Glatt AE, Chirgwin K.Pneumocystis cariniiPneumonia in
esteroidales prolongados, la quimoprofilaxis con human immunodeficiency virus infected patients. Arch
cotrimoxazol, se encuentra ampliamente documenta­ Intem Med 1990; 150:271-9.
da e instaurada en los protoc,olos de manejo de la Hennequin C, Page B,.Roux B, Legendre C, Kreis H.
mayoría de los centros especializados. Esta, ha mos­ Outbreak of Pneumocystis carinii pneumonia in a re­
trado utilidad tanto en la prevención de la neumo- nal transplant unit. Eur J Clin Microbio! Infect Dis
Capjtulo31

MICROSPORIDIOSIS
MICROSPORIDIOSIS ,.,l! 1
y túbulos renales. Se diseminan por diversos tejidos
y en las infecciones avanzadas tienden a localizarse
en el ríñón y el cerebro. Las esporas son elipsoidales 1
ANTONIO ATIAS y JUAN CARLOS WEITZ y alargadas, miden 2,5 - 3,2 x 1,2 - 1,6 µm y su tubo
polar tiene 4 a 5 volutas.
. Encephalitozoon hellem. Se ha aislado del epi­
teho cornea! y de la conjuntiva y también se han
descrito infecciones generalizadas en pacientes con
SIDA. A diferencia de E. cuniculi, no es infectante
para los ratones. Las esporas son similares en lon­
Definición. Infección protozoaria producida por se multiplican activamente. Se produce primero una gitud a las de E. cuniculi, pero son más redondea­
diversos géneros de microsporidios que afectan a fase de divisiones por fisión binaria o por fisión das. Miden 2,0 - 2,5 x 1,0 - 1,5 µm y presentan 6
casi todos los invertebrados y gran cantidad de ver­ múltiple (merogonia), seguido de una fase de pro­ a 8 volutas en su tubo polar.
tebrados. En el hombre compromete principalmen­ ducción de esporas (esporogonia). La esporogonia Encephalitozoon intestina/is. Es un microspo­
te a los individuos con graves alteraciones in­ puede ocurrir dentro de una vacuola parasitófora o ridio intestinal que causa graves diarreas e infeccio­
munitarias, en especial a aquellos que padecen de esporófora de gruesas paredes (paredes panesporo­ nes generalizadas en pacientes con SIDA , denomi­
SIDA, y es considerada como una infección oportu­ blásticas) o se dispersan libremente en el citoplasma nado previamente como Sepia/a intestina/is. El de­
nista. de la célula-hospedera, lo cual es utilizado para la sarrollo dentro del enterocito se produce en una
clasificación de los diversos géneros de microspori­ vacuola parasitófora circundada por una membrana
Biología dios. y los estados esporogónicos están separados entre sí
Figura 31-2. Descarga del esporoplasma en la célula hos­
Se han descrito más de setecientas especies de por bridas o septas (de allí el nombre de Septata).
pedera. A, B, C: distintos estadios de la descarga del
Los microsporidios son protozoos parásitos in­ microsporidios en una amplia gama de hospederos
esporoplasma hacia el citoplasma de la célula (Ci). (Dibujo Las esporas miden 1,2 x 2,0 µm y el tubo polar pre­
tracelulares obligados, los cuales, por su particular que abarca a la mayoría de los invertebrados y a las senta entre 4 y 7 volutas.
original del Prof. Dr. Luis Strozzi, Chile).
biología y organización, conforman el Phylum Mi­ cinco clases de vertebrados. En los· artrópodos es Estas especies de Encephalitozoon morfológi­
crospora (Sprague, 1977). Por sus características muy conocida y temida la infección por Nosema camente son muy similares y se diferencian por su
ribosomales y ausencia de mitocondrias y peroxi­ apis, especie productora de la nosematosis en las capacidad de infectar ratones y por el perfil proteico
somas, se les ha considerado como organismos pri­ abejas, que provoca ingentes daños en la apicultura, obtenido por separación median!!! electroforesis en
mitivos, ·insertos entre las bacterias (procarióticos) y Nosema bombycis de los gusanos de seda que en geles de poliacrilamida (SDS-PAGE).
y organismos eucarióticos. su momento, amenazó seriamente la industria de la
Las esporas de los microsporidios miden habi­ seda natural. Además, los microsporidios producen Enterocytozoon. El Enterocytozoon bieneusi es
tualmente entre 1-3 µm (Figura 31-1). Presentan importante patología en peces, lagomorfos, roedo­ el más importante microsporidio que produce pato­
una pared indivisible de dos láminas (una exospora res, carnívoros, primates y el hombre. logía en el hombre y se le encuentra en los enterocitos
electrón-densa, de naturaleza proteinácea, y una Hasta el presente, se conocen diversos géneros del intestino aelgado, principalmente en pacientes ··
endospora electrón-lúcida) y en su interior se en­ \ de microsporidios bien definidos en el hombre: Ence­ con SIDA, provocando graves diarreas. Su desarro­
cuentra un elemento plasmodial, el esporoplasma, 1
phalitozoon, E11terocytozoon, Vittaforma, Nosema ·no se efectúa en contacto directo con el citoplasma
que es la forma infectante del parásito. El esporo­ y Pleistophora, pero, además, se han aislado algu­ de la célula hospedera, sin formar vacuolas parasi­
plasma presenta uno o dos núcleos y el tubo polar. nos parásitos que no han podido ser clasificados en tóforas. Sus esporas son elipsoidales y miden I, I -
Este complejo filamento se enrolla alrededor del
parásito y su parte anterior es recta y está conectada e ninguno de estos géneros y, convencionalmente, se
les agrupa como Microsporidium sp. En la Tabla
1 ,6 x O,7 - 1,0 µm, con 5 a 7 volutas del tubo polar.
al saco polar ubicado en la extremidad anterior de la 31-1, se resumen las características de estos géneros Nosema. Es uno de los géneros más conocidos
espora, justo donde la exospora se adelgaza. La y sus principales especies. porque está constituido por diversas especies pará­
sección recta del tubo polar está rodeada• por el sitas de insectos como Nosema bombvcis de los
polaroplasto, membrana dispuesta en capas laxas o Encephalitozoon. Es parásito de vertebrados. gusanos de seda y, principalmente, N. •apis de las
densas. Cuando la espora alcanza el intestino de un Su desarrollo se produce en vacuolas parasitóforas abejas. También es un parásito muy importante de
nuevo hospedero, las membranas del polaroplasto dentro de células de su hospedero. Hasta el presente vertebrados. El desarrollo de las esporas se produce
se hinchan y provocan una intensa presión que de­ se han descrito tres especies que parasitan al l10m­ en contacto directo con el citoplasma de la célula
te1:"ina la salida al exterior del tubo polar, el cual se bre: E. cuniculi, E. hel/em y E. intestina/is. hospedera; es decir, no forma vacuolas esporóforas.
estira y desenrrolla en busca de la célula hospedera, Encephalitozoo11 cuniculi. Fue el primer micros­ En el hombre se ha descrito Nosema co1111ori que
a la cual penetra. Conseguido este objetivo, el poridio reconocido como parásito de amplia distribu­ provocó una infección sistémica en un niño inmuno­
esporoplasma avanza a _través del tubo polar, que­ ción en mamíferos, incluidos roedores, carnívoros y comprometido. Las esporas són ovales, miden 4,0 -
dando moculado en el citoplasma de la célula inva­ primates. La infección natural de estos animales fre­ 4,5 x 2,0 - 2,5 µm, con alrededor de 11 volutas en
dida (Figura 31-2). Este mecanismo de infección es Figura 31-1. Modelo semiesquemático de espora de el tubo polar.
cuentemente es por transmisión congénita a partir de
único en el Reino Animal. Si el tubo polar falla en microsporidio. Sp: Saco polar; Lp: Laminillas del poro­ madres preñadas sin manifestaciones clínicas. Los
su intento de alcanzar la célula hospedera, el esporo- blasto; Fp: Filamento polar; Ex: Exospora; En: Endospora; Vittaforma. Conocido previamente como lfose­
cachorros sµ,fren de grave comprofl)iso nervioso,
plasma se pierde. . , .. ·· P: Plasmalema; Vp: Vacuola posterior; C: Citoplasma; N: convulsiones'":/ rigidez, a meñudo mortales. Los ma corne11111, se ha aislado Vittaforma corneae del
Dentro de la célula hospedera los microsporidios· Núcleo. (Dibujo original del Prof. Dr. Luis Strozzi, Chile).
parásitos infectan macrófagos, células peritoneales estroma cornea! de pacientes inmunocompetentes.
288 PARASITOLOGIA MEDICA MICROSPOR/D/OS/S 289

TABLA 31-1 Si bien antes del advenimiento del SIDA se ha­ En el hombre se han descrito dos microspori­
MICROSPORIDIOS: PRINCIPALES GENEROS Y ESPECIES QUE INFECTAN AL HOMBRE bían descrito casos de microsporidiosis, éstos fue­ dios intestinales: Enterocytozoon biene11si y Ence­
ron esporádicos y escasos. Como tantos otros micro­ phalitozoon intestina/is. La diarrea por la micros­
Forma de las esporas Desarrollo N º de Localización organismos y parásitos, los microsporidios han poridiosis intestinal en el SIDA, es provocada más
y tamaño en micrones en la cé/11/a volutas en el hombre irrumpido en los últimos años como agentes opor­ frecuentemente por el E. bie11e11si (80-90%) que por
tunistas muy importantes en el paciente inmuno­ E. intestina/is (10-20%). El E. bie11e11si se localiza
hospedera del t11bo comprometido. La prevalencia de la infección por en el enterocito del intestino delgado, provocando
polar Enterocytozoon bieneusi varia en diversas partes atrofia de las microvellosidades y malabsorción;
del mundo: Uganda 6,5%, Holanda 7,3%, Reino también se ha comprobado compromiso de la vesí­
Encephalitozoon elipsoidales y elongadas en vacuolas 4-5 diseminada Unido 6,8 - 13,5%, Francia 1,6 - 50%, USA 12,5% cula y conductos biliares asociado a una colangitis
Clllliculi 2,5-3,2 X 1,2-1,6 parasitóforas - 32,8%, Australia 33%. Estudios en Chile demos­ esclerosante. El desarrollo dé E. bie11e11si en el
Encephalitozoon redondeadas en vacuolas 6-8 epitelio cornea! traron 33,7% (en 30 de 89 pacientes con SIDA). epitelio del yeyuno íleon, se efectúa en contacto
hellem 2,0-2,05 X 1,0-(,5 parasitóforas y conjuntiva! directo con el citoplasma del enterocito, entre el
Patología núcleo -que aparece con un aspecto dentellado por
Encephalilozoon ovales en vacuolas pa- 4-7 enterocitos de pa- expansiones del parásito-- y el borde de las micro­
i11testi11alis 1,2 X 2,0 rasitóforas cientes con SIDA Los microsporidios son capaces de invadir una vellosidades. E. intestina/is también se desarrolla
E111erocvtozoon elipsoidales directamente 5-7 enterocitos de amplia variedad de células de sus hospederos, repre­ en el epitelio intestinal, pero debido a la infección
hieneu;i l , l -1,6x 0,7-1,0 en el citoplasma pacientes con SIDA sentados por casi todos los invertebrados y gran de los macrófagos se puede desencadenar una in­
parte de los vertebrados. Desde el sitio de penetra­ fección generalizada que puede afectar al riñón, la
Nosema ovales directamente 11 infección sistémica ción, generalmente el intestino, los parásitos son vía biliar, los bronquios, los senos paranasales y la
connori 4,0-4,5 X 2,0-2,5 en el citoplasma en un niño inmuno�
fagocitados por macrófagos móviles y son disemina­ conjuntiva ocular. Su desarrollo en el enterocito se
comprometido
dos por todo el organismo, provocando inflamación produce dentro de una vacuola parasitófora y los
Vittaforma cilíndricas directamente 6 estroma cornea! difusa o focos granulomatosos a nivel del cerebro, estadios esporogónicos están separados entre sí por
corneae 3,7 X 1,0 en el citoplasma riñones y otros órganos. bridas o septas de material finamente granular.
Pleistophora sp. ovales El conocimiento de la patología provocada por Fuera del intestino, la otra localización más fre­
en vacuolas pa- 11 musculatura esque-
3,2-3,4x 2,8 los microsporidios es escasa y poco sistemática y cuente de la microsporidiosis en el hombre es el
parasitóforas !ética de un pacien-
está basada en los hallazgos de la infección natural epitelio ocular, tanto cornea! como conjuntiva!, con
te inmunocompro-
o experimental en animales, los cuales reaccionan en compromiso ocasional de los senos paranasales y
metido VIH (-)
forma muy diversa, de acuerdo con su especie. En pólipos nasales. En estos casos, probablemente la
lvlicrosporidi11111 sp. ovales directamente 11 - 13 estroma cornea! de los mamíferos, el microsporidio más estudiado ha infección se extiende a través de los canalículos
3,5-4,5 X 1,5-2,5 en el citoplasma pacientes inmuno- sido el Encephalitozoon cunic11li, capaz de produ­ lagrimales y conducto lacrimonasal que drena hacia
competentes. cir infecciones cuya severidad depende del tipo de los senos paranasales. Sin embargo, existe la posibi­
hospedero. En roedores la infección natural es poco lidad de la diseminación inversa hacia el ojo desde
relevante y, generalmente, pasa inadvertida; en cam­ el aparato respiratorio, puesto que se puede compro­
Sus esporas son cilíndricas, miden 3,7 x 1,0 µm, bio, en los carnívoros la infección suele ser severa meter primariamente el epitelio traqueobronquial. El
Microsporidi11111 ceylonensis y M africanum, res­
con alrededor de 6 volutas en el tubo polar. con alta mortalidad. Los órganos más afectados son principal microsporidio involucrado en las infeccio­
pectivamente, a estos parásitos.
el cerebro y los riñones, con infiltración inflamatoria nes oculares en el paciente con SIDA es el E11ce­
Pleistophora. Es parásito de vertebrados, prin­ Epidemiología difusa o focos granulomatosos, a los cuales se agre­ phalitozoon hellem, especie morfológicamente si­
cipalmente peces. Se desarrolla en vacuolas esporó­ ga la acumulación creciente de esporas que altera la milar a E. c1111ic11li, pero con diferencias a la micros­
foras en el citoplasma de las células hospederas. En función de los tejidos. copia electrónica y con diverso perfil electroforético
Hasta ahora se desconoce gran parte de los me­
el hombre se ha encontrado Pleistophora sp., como En el hombre, los pacientes con inmunodeficien­ de sus proteínas estudiadas mediante geles de polia­
canismos de transmisión y propagación de los mi­
parásitos de la musculatura esquelética. Las esporas cia celular severa tienen un alto riesgo de desarrollar crilamida con SDS. En el paciente inmunocom­
crosporidios en la naturaleza. Es comprensible la
de aspecto oval, miden 3,2 - 3,4 x 2,8 µm y el tubo una microsporidiosis. Sin embargo, no se sabe si la petente la infección ocular es producida por Vitta­
transmisión de la infección entre el hospedero infec­
polar tiene 11 volutas. infección por microsporidios se debe a una forma corneae un nuevo género de microsporidio.
tado y el hospedero susceptible cuando las especies
reactivación de una infección crónica latente previa También en pacientes con SIDA se ha comuni­
se encuentran en órganos de fácil acceso al medio
Microsporidium. Es el nombre dado para las a la inmunosupresión o se trata de una infección cado peritonitis y hepatitis producidas por Encepha­
externo, como son el intestino o el riñón, pero es más
especies cuyo género no ha sido posible establecer. complejo entender estos mecanismos en el caso de
adquirida recientemente por estos pacientes. litozoon. El género Pleistophoro ha producido gra­
Se trata de microsporidios aislados del estroma Antes del advenimiento del SIDA, se publica­ ves miositis en dos pacientes inmunocomprometi­
las esporas que quedan enclaustradas en los tejidos,
cornea! de un niño de Sri Lanka, cuyas esporas ron pocos casos de microsporidiosis. En el paciente dos (uno VIH negativo y otro con SIDA).
a no ser que ocurra por carnivorismo de lo cual existe
median 3,5 x 1,5 µm y estaban libres en el estroma. inmunocompetente se han relatado casos oculares,
alguna evidencia por una epizootia ocurrida en un
Otro caso que infectaba el estroma cornea! de una neurológicos e infecciones generalizadas. Por su Sintomatología
zoológico, cuyos animales fueron alimentados con
mujer de Bostwana, presentaba esporas libres en el parte, en el paciente inmunocomprometido, especial­
roedores infectados. Otro mecanismo de infección
citoplasma, que medían 4,5 x 2,5 µm, con 11 a 13 mente en los estadios tardíos de la infección VIH, La microsporidiosis puede provocar infecciones
es la transmisión congénita de microsporidios como
volutas del tubo polar. Ambos eran pacientes · in­ cuando los li_nfocitos T CD4 caen bajo 100 por mm3, generalizadas, infecciones localizadas a un órgano
el Encephalitozoon en animales, pero._np compro-
munócompetentes. CatníÍig "iiá propuesto llamar bada en el hombre.
1 la microsporidiosis se transfor¡na en una seria ame­ o sistema y sus efectos varían en el paciente inmu­
naza. nocompetente y en aquellos con SIDA.
1
290 PARASITQLOGIA MEDICA MICROSPORID/OS/S 291

Infecciones generalizadas Infecciones oculares amenaza para los pacientes con SIDA. La sintorna­ hepáticos y moderada dilatación del conducto biliar
tología se caracteriza por diarrea crónica, de sema­ común; en las biopsias de la mucosa de este último
Nosema co1111ari. En el hombre se ha descrito el El compromiso ocular por microsporidios se pre­ nas o meses, liquida, de volumen variable, sin mu­ conducto, observadas por ME, se encontraron esta­
ya clásico caso de Margileth, en un lactante de cua­ senta tanto en pacientes inmunocompetentes como cosidades ni sangre, con 4 a 8 evacuaciones diarias, dos libres o plasrnodiales y esporas de E. bieneusi
tro meses de edad que falleció por diarrea, malabsor­ en aquellos con SIDA. Paradojalrnente, se ha obser­ que se exacerba con la ingestión de alimentos, de en el citoplasma de las células epiteliales y una
ción e inmunodeficiencia por alinfoplasia tímica. En vado que la infección en los inmunocornpetentes se curso afebril, debilitante y con pérdida de alrededor ligera infiltración de la lámina propria por células
la autopsia se encontró una neumonitis por Pne11mo­ extiende profundamente en el estroma cornea!, mien­ de I kg de peso semanal. rnononucleares. Por su parte, Molina en cuatro de
cystis carinii e incontables esporas de Nosema tras que en los pacientes con SIDA queda restringi­ Sin embargo, no todos los autores están de acuer­ cinco pacientes SIDA con infección generalizada
connori difusamente diseminadas en el SNC corazón da al epitelio superficial. do con el verdadero rol patógeno del E. biene11si. En por Encephalitozoon intestina/is, encontró antece­
y musculatura esquelética. La microscopia electróni­ un estudio mediante biopsias intestinales practicado dentes sugerentes de colangitis esclerosante: dolor
ca (ME) demostró dos núcleos en las esporas, carac­ Pacientes inmunocornpetentes. Hay dos casos en pacientes VIH positivos con y sin diarrea, en hipocondrio derecho, con fosfatasas alcalinas
teristico del género Nosema. El niño cayó enfermo clásicos de compromiso cornea! provocado por es­ Rabeneck y cols. encontraron el parásito sin diferen­ elevadas y ecotomografia que demuestra dilatación
a. poco de nacer, por lo que no queda claro si la pecies de microsporidios que no se han podido cla­ cias significativas en ambos grupos (33% en los de la vía biliar.
infección fue perinatal o por vía transplacentaria. sificar y que han sido colocadas en el género colec­ pacientes con diarrea y 25% en los sin diarrea), con­
tivo Microsporidi11m. Uno de ellos fue de un niño de cluyendo que la relación entre microsporidios y dia­ Infecciones 11111sc11lares
E11cepha/itozoo11. Los primeros casos de infec­ Sri Lanka de 11 años que presentaba una lesión rrea, si es que existe, no sería tan importante. Por su
ción por este género de microsporidios fueron infec­ unilateral de la córnea, con vascularización y cicatri­ parte, Weitz y Bryan encontraron microsporidios en Ledford describió el caso de un hombre homo­
ciones por Encephalilozoon c11nic11li cuya identifi­ ces, además de tejido de granulación del párpado las heces de 7 de 43 pacientes VIH positivos asinto­ sexual VIH negativo, que presentaba gran compro­
cación estuvo basada sólo en elementos morfológicos superior; las esporas se encontraban libres o fago­ máticos. miso del estado general, con pérdida de 18 kg de
y antes de la descripción de Encepha/itozoon intes­ citadas por macrófagos, afectando la córnea pero sin peso, fiebre y adenopatías e intensa miositis gene­
tina/is y E. hellem todos los cuales son muy simila­ sobrepasar la membrana de Descernet. El otro caso Infecciones del hígado y de la vía biliar ralizada, con debilidad y contractura musculares. La
res entre sí. De hecho, se han comunicado infeccio­ ocurrió en una mujer de Bostwana que por presentar biopsia demostró esporas identificadas com? Pleisto­
nes generalizadas por E. c11nic11/i y por E. intestina­ falta de visión y la conjuntiva inflamada, se le enucleó Un caso fatal comunicado por Terada, corres­ phora sp., por estar agrupadas en gran número den­
/is. el ojo, encontrándose una úlcera cornea! profunda, ponde a un hombre homosexual con SIDA, sarcoma tro de vacuolas parasitóforas. El electromiograma
Todos los pacientes presentaban algún grado de el estroma necrótico e infiltrado de células inflama­ de Kaposi y candidiasis oral, que desarrolló una reveló una rniopatía difusa y recuento muy bajo de
inmunodeficiencia, pero los primeros dos casos ocu­ torias y esporas libres o fagocitadas. Estos micros­ hepatitis con ictericia progresiva de la cual no se linfocitos CD4. Este paciente fue controlado cuatro
rrieron en niños con una falla inmunitaria leve. El poridios se han denominado, respectivamente, Mi­ recuperó. La enfermedad se inició con profunda años más tarde: continuaba con profundo compro­
caso de Matsubayashi, era un niño japonés de nue­ crosporidi11m ceylonensis y M. africanwn. astenia, pérdida de peso, diarrea e ictericia; el pacien­ miso del estado general, inmunodeficiente y seguía
ve años de edad que presentó una enfermedad neu­ Otro caso es de un hombre inmunocornpetente te falleció al cabo de cuatro meses. Las biopsias VIH negativo. Por su parte, Chupp ha descrito un
rológica grave, de tres a cuatro semanas de evolu­ que desarrolló una queratitis de evolución crónica, hepáticas demostraron una granulornatosis focal, caso similar, es decir, un paciente inmunodeficiente,
ción, caracterizada por vómitos, cefalea, fiebre, con­ resistente al tratamiento tópico y que, finalmente, necrosis supurativa y la presencia de numerosas pero, en este caso, se trataba de un enfermo con
vulsiones y pérdida de conciencia. Tanto del LCR requirió de un trasplante cornea!. Esta vez se en­ esporas que por microscopia electrónica (ME) fue­ SIDA.
como de la orina, se aislaron esporas de Encephali­ contraron microsporidios que por su morfología y -! ron diagnosticadas corno Encephalitozoon cuniculi.
tozoon y también se obtuvieron al inocular ratones perfil proteico, se concluyó que pertenecía a Vitta­ La autopsia confirmó lo anterior, además de com­ Diagnóstico
con esos fluidos del enfermo. La recuperación del forma comeae. promiso difuso de todos los órganos.
niño ocurrió probable.mente en forma espontánea. El La colangiopatía descrita en el SIDA y el desa­ El diagnóstico de estas parasitosis es de relativa
otro paciente, descrito por Bergquist, fue un niño de Pacientes con SIDA. Con creciente frecuencia rrollo de una colangitis esclerosante, puede estar dificultad pues requiere de un alto nivel de adiestra­
dos años de edad nacido en Colombia, pero residen­ se está diagnosticando en estos pacientes, casos de asociada a dichos agentes oportunistas, tales como miento técnico, y de costosos elementos de labora­
te en Suecia, que presentó un cuadro neurológico compromiso bilateral de la córnea y de la conjuntiva, CMV, Micobacterium, Cryptosporidiwn, lsospora torio según sea el nivel de complejidad de este pro­
similar al anterior, de varios meses de evolución. En con inflamación conjuntiva!, queratitis y disminu­ y los microsporidios intestinales Enterocytozoon ceso.
este caso, se aislaron las esporas en ratones libres ción de la visión, en lo que se ha podido aislar biene11si y Enceplzalitozoon intestina/is. Poi ha Inicialmente la microsporidiosis se diagnostica­
de Encepha/itozoon e inoculados con la orina del microsporidios. Estos microsporidios corresponden comunicado un caso de este tipo de colangitis en un ba sólo mediante microscopia electrónica, posterior­
enfermo. También este niño se recuperó. al Encephalitozoon hellem. Es probable que la infec­ paciente con SIDA y diarrea severa, en el cual se mente se han desarrollado distintas tinciones que
Las otras infecciones ocurrieron en pacientes ción por E. hellem no sólo se radique en el ojo sino aislaron formas libres de microsporidios en la bilis permiten distinguir a estos protozoos en fluidos,
con SIDA y fueron de curso fatal: el caso de Zender que pueda extenderse a la mucosa nasal, provocan­ y por ME se identificó Enterocytozoon bieneusi en escarificación cornea!, deposiciones, aspirado duo­
es de un paciente con pérdida de 13 kg de peso que do pólipos con obstrucción nasal que no responde biopsias duodenales, pero con examen negativo en denal, etc. En biopsias observadas por microscopia
empeoró al poco tiempo de haber sido tratado de al tratamiento antibiótico, y sinusitis. También en el biopsias hepáticas; el parásito se encontró constan­ de luz o en citología, existe buena experiencia con
neumonía por Pne11mocystis corinii y en el cual se paciente con SIDA se ha descrito el compromiso temente en las biopsias duodenales y en dos mues­ las tinciones de Giernsa, Warthin Starry, Schiff,
comprobó peritonitis, atrofia cerebral, insuficiencia conjuntiva! en casos de infección generalizada por tras de bilis, la primera obtenida antes de inicio de azul de toluidina y hematoxilina eosina, aunque en
renal aguda y una masa tumoral en el abdomen; en Encephalitozoon intestina/is. la colangitis esclerosante. A su vez, Beaugerie des­ general depende de la experiencia de cada grupo de
la autopsia se hizo el hallazgo, dentro de esta masa trabajo en cada una de ellas.
cribió el caso de un enfermo de iguales caracteris­
tumoral, de acúmulos de Encephalitozoon en va­ Infecciones intestinales ticas (VIH positivo y diarrea crónica), con fosfatasas Las muestras (secreción nasofaríngea, orina) se
cuolas parasitóforas intracelulares y una inflama­ alcalinas elevadas cuatro veces por sobre los límites han logrado cultivar en medios de cultivos de ma­
ción no granulo111atosa. El cuarto caso de infec¡:jón_ Las infecsio11�s intestinales por microsporidios normales, pero con bilirrubintirnia y aminotrans-.. ..crpfagos humanos, de pulmón fetal humano Y en
por Encepha/itozoon se. describirá en las infeccio- · son provocadas por Enterocytozoon biene11si y Ence­ ferasas normales; la colangiografia mostró irregula­ rnonocapas de células de riñón de mono, para luego
nes hepáticas y de la vía biliar. plzalitozoon intestina/is y representan una grave ridades del lumen de los conductos biliares intra- aplicar otro método de diagnóstico como tinciones.
292 � PARASITOlOGIA MEDICA MICROSPORIDIOSIS 293

En la microsporidiosis intestinal, por su impor­ macos actualmente en uso para lograr penetrar las Clin Infect Dis 1993; 16: 15-21. nosematosis in an immunologically compromised
tancia clínica, se ha trabajado especialmente en la gruesas paredes de las esporas maduras y aunque Da Silva, Scbwartz D, Visvesvara G, DE Moura H y cols. infant. Arch Pathol 1973; 95: 145-50,
búsqueda de las esporas en muestras fecales. Inicial­ los estadios prolíferativos o plasmodiales de los Sensitive PCR diagnosis of infection by Enterocy­ Matsubayashi H, Koike T, Mikata Y y cols. A case of
mente se estudiaron con Giemsa, posteriormente se parásitos sean destruidos, esas esporas pueden tozoo11 biene11si (Microsporidia) using primers based Encephalitozoon - like body infection in man. Arch
obtuvo excelente correlación de microscopia electró­ reactivarse cuando se suspende el tratamiento. on the region coding for small subunit rRNA. J Clin Pathol 1959; 67: 181-7.
nica con la tinción tricrómica de Weber (y sus pos­ Mediante cultivos en fibroblastos se ha estudia­ Microbiol 1996; 34: 986-7, Metcalfe T, Doran R, Rowland P, Curry A, Lacey CJN,
teriores modificaciones) y, últimamente, mediante do la sensibilidad de E. czmiculi a un número con­ DeGirolami P, Ezratty C, Desai G, Me Cullough A y cols. Microsporidial keratoconjunctivitis in a palien! with
el fluorocromo Uvitex ·2B o con calcofluor, ambas 'siderable de fármacos, siendo efectivos sólo la fuma­ Diagnosis of intestinal microsporidiosis by examination AIDS, Br J Ophthalmol 1992; 76: 177-8.
leídas con microscopia de fluorescencia. En nuestra gilina y el albendazol. of stool and duodenal aspirate with Weber's modified Orenstein JM, Chang J, Steinberg W y cols. Intestinal
experiencia, utilizando muestras fijadas se obtiene En clínica se ha empleado la fumagilina tópica trichrome and Uvitex 2B stains, J Clin Microbiol 1995; microsporidiosis as a cause of diarrhea in human
excelente resultado con la tinción de Weber; en en el compromiso ocular por E. he/lem, con buenos 33: 805-10. immunodeficiency virus-infected patients; A report of
cambio, no fue comparable con Uvitex por la gran resultados y, recientemente, se ha descrito un caso Desportes Y, Le Charpentier Y,Galian A y cols. Occurence 20 cases. Human Pathol 1990; 21: 475-81.
cantidad de falsos positivos. Todas estas tinciones de E. he/lem generalizado y con compromiso ocular of a new microsporidian: E11terocytozoon bieneusi n.g,, Poi S, Romana CA, Richard S y cols, Microsporidia
tienen problemas: el Giemsa tiñe azul tanto bacterias en que se utilizó fumagilina tópica y albendazol n.sp., in the enterocytes of a hwnan palien! with AIDS, infection in patients with the human immunodeficiency
como microsporidios; con el Weber se logra una oral con excelente evolución. Con itraconazol se J Protozol 1985; 32: 250-4. virus and unexplained cholangitis, N Engl J Med 1993;
muy buena tinción de los microsporidios, pero se­ han obtenidos respuestas irregulares y con recidiva Didier ES, Didier PJ, Friedberg DN y cols. Isolation and 328: 95-9.
gún sea la decoloración se tiñen iguales algunos precoz una vez discontinuado el fármaco. characterization of a new human microsporidian Rabeneck L, Cyorkey F, Genia RM y cols. The role of
hongos y bacterias; y con el Uvitex los hongos El albendazol es un fármaco que inhibe la Encep!zati/ozoo11 lzellem (n.sp.) from three AIDS Microsporidia in the. pathogenesis of HIV- related
fluorescen en forma similar a estos protozoos. Según polimerización de la tubulina de los microtúbulos, patients with keratoconjunctivitis. J Infect Dis 1991; chronic diarrhea. Ann Inter Med 1993; 119: 895-9,
distintos estudios de sensibilidad de estos métodos, interfiriendo en la captación de nutrientes y en la 163: 617-21. Shwartz DA, Visvesvara GS, Leitch GJ y cols. Pathology
los mejores resultados se obtienen con el Weber y división celular de los estadios proliferativos de los Didier E, Rogers L, Brush A, Wong S y cols. Diagnosis of of symptomatic micrsoporidal (Encep/,a/itozoon he/len)
las técnicas de fluorescencias. Por lo anterior, algu­ microsporidios. Se ha utilizado en un número menor disseminated Encepha/itozoon helfem infection by bronquiolitis in AIDS: a new respiratory pathogen
nos autores proponen aplicar siempre en el diagnós­ de cien casos de infección por E. intestina/is, en PCR-southern analysis and successful treatment with diagnosed from lung biopsy, broncoalveolar lavage,
tico de la microsporidiosis, la tinció'n más algunas de dosis de 400 mg 2 veces al día por 2 a 4 semanas, albendazole and fumagilin. J Clin Microbiol 1996; 34: sputum, and tissue culture. Hum Patbol 1993; 24:
las de fluorescencia directa, aumentando así la sen­ teniendo buenos resultados, lo que ha sido corrobo­ 947-52, 937-43.
sibilidad y especificidad. rado en recientes publicaciones de dos casos gene­ Didier E, Orenstein J, Aldreas, Bertucci D y cols, Compa­ Shwartz D, Bryan R, VisvesvaraG. Diagnostic approaches
Se han desarrollado técnicas IFI con anticuerpos ralizados a los que se les practicó autopsia no encon­ rison of three staining methods for detecting micros­ for Encephalitozoon infections in patients with AIDS.
policlonales y luego monoclonales para el diagnós­ trando microsporidios en los tejidos. En cambio, poridia in fluids. J Clin Microbiol 1995; 33: 3138-45, J Eukaryot Microbio! 1994; 41: 59S-60S.
tico del género Encephalilozoon y especialmente cuando se aplica esta terapia a pacientes con E. Dietrich D, Lew E, Kotler D, Poles M, Orenstein J. Silveiro H, Canning E, Villaforma corneae n. comb. forthe
para E. helleni, y en mucho menor grado para E. bieneusi, si bien en alrededor del 50% se logra res­ Treatment with albendazole far intestinal disease due human microsporidium Nosema corne11111 Shadduck, ·
bieneusi. puesta parcial a moderada, no se ha logrado erradicar to Enterocytozoon biene11si in palien! with AIDS. J Meccoli, Davis and Font 1990, based on its
La ME tiene aún una amplia aplicación en la al agente del intestino. Infect Dis 1994; 169: 178-83. ultraestructure in the liver of experimentally infected
microsporidiosis, puesto que se están descubriendo Un paciente con microsporidiosis muscular fue Hartskeerl R, VanGool T, SchuitemaA, Didier E, Terpstra mice. J Eukaryot Microbiol 1995; 42: 158-65, ··
nuevas especies tanto humanas como animales y, tratado con cotrimoxazol y sulfas sólo con remisión W.Genetic and immunological characterization ofthe Sobottka Y, Albrecht H, Schiifer H, Schottelius J y cols,
por otra parte, permite diferenciar los microsporidios parcial de los síntomas. microsporidian Sepia/a i11testina/is Cali, Kotler, and Disseminated Enceplzalitozoo11 (Septata) Ílllestinalis
aislados en muestras de pacientes. Así en el estudio Orenstein, 1993: reclassification to Enceplzalitozoon infection in a patient with AIDS: novel diagnostic
de los microsporidios intestinales, mientras E. in­ i11testina/is. Parasitology 1995; l 10: 277-85. approaches and autopsy confirmed parasitological cure
testina/is se desarrolla dentro de una vacuola para­ BIBLIOGRAFIA Joste N, Rich J, Busam K, Schwartz D. Autopsy following treatment with albendazole. J Clin Microbio!
sitófora, E. bieneusi lo hace directamente en el cito­ verification of Encephalitozoon i11testi11alis (Micros­ 1995; 33: 2948-52.
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PARAS/TOLOGIA MEDICA Capítulo 32
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TRICOMONOSIS
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VIVIANAREYES

Definición. Es la presencia de protozoos flage­ sobre la membrana ondulante, la cual es relativamen­


lados, pertenecientes a la familia Trichomonadidae te más corta que en las otras especies. Posee un
y al género Trichomonas, que parasitan el tracto grueso axostilo con mayor cantidad de gránulos
digestivo o reproductor del hombre y una gran siderófilos a su alrededor y un citostoma muy poco
variedad de animales vertebrados e invertebrados evidente. El complejo blefaroplástico es único, se
(monos, roedores, aves, palomas, termitas y babo­ encuentra en el polo anterior del cuerpo y está com­
sas). puesto por un cinetonúcleo y un corpúsculo basal
En el ser humano ocurre la infección por tres del cual emergen los flagelos. La membrana ondulan­
especies: Trichomonas vaginalis -la única con po­ te es una prolongación protoplasmática que ocupa
der patógeno (tricomonosis urogenital)-, Trichomo­ los dos tercios anteriores del cuerpo; en su borde
nas tena.x: y Trichomona hominis, ambas especies libre se encuentra el flagelo posterior y, en su base,
comensales del aparato bucal e intestino grueso, la costa o filamento fibrilar. El cuerpo parabasal (apa­
respectivamente (Tabla 32-1 ). rato de Golgi) es una formación piriforme, vecina al
núcleo. El núcleo es ovalado, con cromatina granular
Biología uniformemente distribuida y cariosoma subcentral.
El citoplasma tiene una estructura granular fina, con
Las tricomonas presentan las siguientes caracte­ gran cantidad de gránulos siderófilos y vacuolas
risticas morfológicas: un citostoma, un grupo de digestivas, contráctiles y excretoras.
flagelos anteriores libres, un flagelo adicional sobre Se divide por fisión binaria longitudinal y no
el margen externo de una.membrana ondulante y un forma quistes. El parásito se desplaza con facitidad
axostilo prominente que generalmente emerge por el en todas las direcciones, con movimientos de rota­
extremo posterior del cuerpo (Figura 32-1). ción y balanceo mediante sus flagelos o por pseudo­
Todas las especies del género Triclzomonas son podios.
parásitos y ninguna de ellas produce quistes; por lo
tanto, solamente son conocidas en su estado de
trofozoíto. Se multiplican en forma asexuada por fi­
sión binaria longitudinal, la cual es iniciada por divi­
sión del núcleo seguida por separación del citoplas­
ma en dos organismos.

1RICOMONOSISUROGENITAL

Es producida por Trichomonas vaginalis, proto­


zoo flagelado unicelular y cosmopolita, que se en­ /
cuentra en el tracto genitourinario de la mujer y del ¡
hombre, en todo el mundo.

Biología

Trichomonas vaginalis existe solamente en el


estado de trofozoíto, el cual presenta un aspecto
piriforme y es la especie de mayor tamaño: mide 7 a
23 µm de longitud por 5 a 12 µm de ancho; es decir,
es mayor que un leucocito polimorfonuclear, pero
más pequeña que las células epiteliales maduras. Figura 32-1. Dibujo esquemático de.Trichomo11as vagi­
Presenta cuatro flagelos anteriores libres y un quinto na/is.
296� PARASITOLOGIA MEDICA TRICOMONOSIS 297

TABLA32-] cocitos y exudados celulares. En la mujer; el pará­ 20% y está presente sólo en un 20 a 30% de aquellos
DIFERENCIAS MORFOLOGICAS, FISIOLOGJCAS Y PATOGENICAS sito se alimenta sobre la superficie mucosa de la cuyas parejas tiene vaginitis tricomononósica.
vagina, ingiriendo bacterias y leucocitos y, a la vez, La tricornonosis es más frecuentes entre mujeres
DE LAS TRICHOMONAS DEL HOMBRE es fagocitado por monocitos macrófagos. de raza negr!I. La razón de esta diferencia racial es
T. vagina/is T. hominis T. tena.,
desconocida, pero pudiera estar relacionada a facto­
Epidemiología res socioeconórnicos, como educación e ingreso,
Hábitnt Vnginn, glándulas de {ntestino Boca y nmlgdalas condiciones de vida y facilidades sanitarias.
Bartholino. uretra, vejiga La actual prevalencia de tricomonosis en la
urinaria y próstata población general es desconocida, porque la enfer­ Patología
Tamaño 17-30 micrones 5-14 micrones 5-12 micrones
medad no es notificada y debido a la baja sensibili­
dad relativa de los métodos de diagnóstico común­ Trichomonas vagina/is no puede vivir natural­
Fonna Pirifom1e Pirifonue Ovalada o redonda, raramente mente empleados. Sin embargo, su prevalencia en mente sin estrecha asociación con el tejido vaginal,
pirifonne grupos de pacientes específicos, varía dependiendo uretral o prostático. Unos pocos días después de la
Núcleo Ovalado, con gránulos Redondo u ovalado Ovalado, con cromatina fina. del nivel de actividad sexual, composición racial de llegada a la vagina, la proliferación de colonias de
finos de cromatina. Cario- con cromatim1 difusa Cnriosoma excéntrico la población estudiada y de los métodos de diagnós­ flagelados causa degeneración y descamación del
soma excéntrico tico usados. epitelio vaginal, con infiltración leucocitaria, au­
Complejo blefaroplástico Unico Doble Unico La tricomonosis es una de las infecciones adqui­ mento de las secreciones vaginales que llegan a ser
ridas por transmisión sexual más comunes, con una abundantes y con características especiales (líqui­
Flagelos Cuatro anteriores y uno en el Cinco anteriores y uno en el Cuatro anteriores y uno en el
borde libre de In membrana borde libre de la membrann borde libre de la membrana
incidencia anual estimada en ciento ochenta millo­ da, verde o amarilla), con gran número de tricomonas
ondulante ondulante ondulante nes de mujeres en todo el mundo y en 2,5 a tres y leucocitos. El orificio uretral, glándulas vesti­
millones de casos anuales en USA. bulares y clítoris, se observan intensamente infla­
Membrana ondulante 1/3 n 2/3 del lnrgo del cuelJlO Todo el largo del cuelJlO 2/3 a 3/4 del largo del cueljlO Las mujeres sexualmente activas tienen un alto mados. Cuando la infección aguda cambia al estado
sobrepasando el extremo
posterior
riesgo de tener tricomonosis. La mayor incidencia crónico, lo que ocurre usualmente, existe una ate­
ocurre entre los veinte y cincuenta años de edad, el nuación de los síntomas, la secreción pierde su as­
Medios de cultivo Dificil de desarrollnr Fácil de obtener en medios Dificil de desarrollar. Se periodo de mayor actividad sexual. La infección es pecto purulento debido a la disminución del núme­
Temperatura óptima: 37 ºC corrientes (caldo peptonado) necesitan medios especiales de mayor prevalencia en pacientes con múltiples ro de tricomonas y leucocitos, al aumento de células
en medios especiales Temperatura óptima: 25-30ºC
parejas sexuales. Entre prostitutas, se ha aislado la epiteliales y al establecimiento de una flora bacte­
Poder patógeno Si No No T. vagina/is en el 50-75% de ellas. riana mixta.
Animales susceptibles Sólo el hombre. Experimental- Ratones No se conocen Alrededor de un 13 a 25% de las mujeres aten­ En el hombre la infección generalmente es asin­
mente se puede infectar el didas en consultas ginecológicas tiene tricomonosis. tomática, aunque puede provocar una uretritis o
Macaccus rhesus. previo En mujeres asintomáticas, la prevalencia de culti­ prostatitis irritativa.
tratamiento con estrógenos vos positivos es de 3 a 15%. Se requiere un gran número de parásitos para
Es frecuente la ocurrencia simultánea de más de causar síntomas. Un pequeño número de tricornonas
una enfermedad sexualmente transmitida y se en­ puede, ocasionalmente, ser encontrado en una pa­
cuentra en tasas altas de incidencia en poblaciones ciente sin síntomas, con pH vaginal y flora vaginal
Habita en la vagina y uretra de la mujer, y en la pueden sobrevivir en esponjas húmedas por varias con alto riesgo para otras enfermedades venéreas. normales, lo que puede ser interpretado como un
glándula prostática, vesículas seminales y uretra horas, lográndose obtener cultivos positivos en La infección concomitante con Neisseria gono­ estado de portador. En la mujer, el establecimiento
del hombre. La infección por T. vagina/is, necesa­ muestras tornadas desde ropa húmeda hasta veinti­ rr/zoeae es entre 20 a 50%. Sin embargo, la infec­ o desarrollo de T. vagina/is se ve influenciado por
riamente transmitida por el trofozoíto, tiene como cuatro horas después de la inoculación, lo que indi­ ción por hongos es detectada con menor frecuencia factores generales como es el nivel de estrógenos
mecanismo de transmisión principal el contacto ca la posibilidad de transmisión por ese mecanis­ entre mujeres con tricornonosis; los mecanismos circulantes, ya que de ellos depende la producción
sexual. Mientras la infección durante el baño es mo. En la orina, la tricornona es capaz de sobrevivir para el antagonismo entre ambas infecciones no son de glicógeno por las células vaginales.
altamente improbable. En forma ocasional puede por más de veinticuatro horas y es común encon­ conocidos, pero T. vagina/is es encontrada en un En la etapa prepuberal, de lactancia y posmeno­
ser contraída entre adultos, desde o a través de trarla en orina sedimentada o centrifugada de hom­ medio relativamente alcalino, mientras que los pausia, se pierde la estimulación vaginal de produc­
piscinas, aguas terniales y por uso compartido de bres y mujeres, donde puede permanecer activa por hongos requieren de un pH vaginal más ácido. ción de estrógenos, el pH es anormalmente alto y la
ropa interior, toallas, etc. Esta fonna de transmi­ horas, con ondulaciones progresivas y movimientos En la embarazada, T. vagina/is puede ser encon­ flora normal puede ser reemplazada por flora mix­
sión extravénerea se ha invocado en niñas y mujeres pseudopodiales. Puede sobrevivir hasta cinco horas trada en un 20 a 30%, aunque sólo un 5 a 10% se ta. Bajo estas circunstancias, la vagina no favorece
vírgenes. No es rara la observación de la disemina­ en aguas entre 18 y 29ºC y en un pH de 4,9 a 7,5. acompaña de síntomas. la infección, pese al efecto de la acidez disminuida;
ción de la infección desde madres infectadas a sus La temperatura óptima de desarrollo en cultivos La incidencia de la infección en el hombre es sin embargo, la administración tópica o sistémica
hijas. es de 37ºC, reproduciéndose cada cinco a nueve menor que en la mujer y con frecuencia, es asinto­ de estrógenos puede causar una infección subclínica
El trofozoíto es muy lábil y se destruye con fa­ horas. La acidez de la vagina normal (pH 4-4,5) mática. El 100% de las parejas sexuales de hombres que llegará a ser sintomática. Altos niveles de
cilidad en el medio ambiente, especialmente en au­ generalmente desfavorece la infección; prefiere un con tricomonosis tiene la infección, confirmando su esteroides sexuales, como ocurre durante el emba­
sencia de humedad adecuada, temperatura y condi-­ medio ligeramente alcalino a algo más ácido que la importancia en la propagación. La prevalencia de razo, parece promover el desarrollo de síntomas
ciones de pH. Las tricornonas sucumben rápida­ vagina sana, pero una vez establecido, el parásito T. vagina/is entre hombres asintomáticos varía en­ refractarios. En la paciente embarazada, la descar­
mente a temperaturas sobre 40ºC o frente a la ac­ mismo causa una tendencia a la alcalinidad (pH 5- tre un 3 y 10%, mientras que en pacientes con ga vaginal aumenta por la secreción de mucus de­
ción de la luz solar directa y en no más de treinta y 6), con lo cual favorece su crecimiento. uretritis y prostatitis inespecíficas es de un 1O a bido a un cérvix hiperactivo, hipertrófico y blando.
cinco a cuarenta minutos en agua. Sin embargo, Las tricomonas se alimentan de bacterias, leu-
298.: PARASITOLOGIA MEDICA TR/COMONOS/S 299

La baja acidez vaginal causada por la sangre La calidad de la leucorrea ocasionalmente su­ vos, algunos autores han reportado una tasa aumen­ y cubreobjetos con el propósito de visualizar al mi­
menstrual, mucorrea cervical, semen e infecciones giere el posible diagnóstico de tricomonosis, pese a tada de tricomonosis en pacientes portadoras de croscopio las tricomonas móviles. Este método
concomitantes como con Gardnerella vagina/is, que T. vagina/is puede ser encontrada con cualquier DIU o uso de contraceptivos orales, mientras que en pennanece aún como el más ampliamente usado
favorecen el establecimiento de las tricomonas. tipo de descarga. La leucorrea espumosa ocurre más otras series, la prevalencia de la infección no es para el diagnóstico de tricomonosis, por ser un pro­
frecuentemente en presencia del parásito, pero el afectada por el uso de contraceptivos en general, no cedimiento útil, sencillo, rápido y de bajo costo,
Sintomatología 30% de las mujeres con estos síntomas no tiene por un método específico. aunque poco sensible. Bajo las mejores circunstan­
tricomonosis y, por lo tanto, esto no soporta el pos- En el hombre, la tricomonosis puede ser respon­ cias, alcanza una sensibilidad sólo de un 50 a 70%.
La presencia de síntomas es más frecuente e , tulado de que la leucorrea espumosa es patogno­ sable de morbilidad, pero a menudo es asintomáti­ La habilidad del examen directo para detectar el
importante en el sexo femenino; en el hombre pro­ mónica y, por otro lado; el valor clínico de este ca. Puede provocar uretritis, prostatitis, cistitis, epi­ parásito está directamente relacionada con el núme­
voca escasa o nula sintomatología, puesto que en el síntoma es también reducido, porque ocurre sola­ didimitis y, raramente, esterilidad reversible. La ro de tricomonas y diagnostica principalmente aque­
tracto urogenital masculino, el parásito no encuen­ mente en el 12% de los casos. infección puede ser latente y, por lo tanto, esencial­ llas infecciones sintomáticas que cursan con mayor
tra condiciones favorables para su desarrollo. Las La leucorrea puede ser variable en cantidad, de mente poco sintomática o puede ser responsable de descarga vaginal y mayor número de T vaginalis.
variadas formas clínicas de la enfermedad depen­ color amarillenta, verdosa o gris, teñida con sangre, una irritación persistente o uretritis recurrente. En Se .requerirían aproximadamente mil tricomonas por
den probablemente del número y virulencia del espumosa, inodora o de olor fuerte. Otros síntomas uretritis inespecífica, se ha detectado T. vaginalis en mL de descarga para un examen directo positivo.
parásito y la resistencia del hospedero. La presencia son el prurito vulvar, el ardor y la irritación genital el 10 a 20% de los sujetos. El compromiso de la La presencia de ducha previa, en las veinticuatro
o ausencia de síntomas aparentemente está asocia­ dolorosa, que puede llegar a provocar intensa próstata es frecuente en la etapa crónica de la infec­ horas antes, está asociada con una reducción impor­
do a la cantidad de tricomonas y al valor de pH en dispareunia. La metrorragia se debe a una cervicitis ción. tante de su sensibilidad.
el tracto vaginal, ya que cuando hay síntomas y crónica.
cifras de pH más alcalino se encuentra un mayor Al examen ginecológico, la presencia de un Diagnóstico Examen directo al fresco de orina. Se utiliza
número de parásitos. cérvix alterado con aspecto edematoso, eritematoso orina de primer chorro. Es útil especialmente en
La infección asintomática no tiene una preva­ y friable, con áreas puntiformes de exudado, es Las manifestaciones clínicas no son confiables pacientes de sexo masculino. Consiste en la obser­
lencia definida; sin embargo, varios estudios han patognomónico, pero su prevalencia de 2 a 3% no para efectuar un diagnóstico exacto y la existencia vación directa de la orina o del sedimento urinario
mostrado que entre 10 a 50% de las mujeres infec­ lo hace de ayuda frecuente en el diagnóstico. El de J.ma población asintomática hace que el diagnós­ obtenido por centrifugación de la muestra a baja
tadas con T. vagina/is carecen de síntomas. Aproxi­ exudado inflamatorio también puede cubrir la mu­ tico esté basado en algún método de demostración velocidad.
madamente, sólo un 25% de ellas son detectadas cosa vaginal y la vulvitis está marcada por la pre­ del parásito.
por examen directo, ya que, en general, tienen me­ sencia de eritema, dol'or y edema. La confirmación de la tricomonosis se efectúa Examen directo de otras muestras. Prepara­
nores recuentos parasitarios. La importancia de co­ Las manifestaciones clínicas son inespecíficas y mediante técnicas directas e indirectas. La sensibi­ ciones de las secreciones diluidas en solución salina
nocer el grupo de individuos asintomáticos radica cualquier causa de cervicitis y vulvovaginitis puede lidad de las diferentes técnicas guarda estrecha re­ isotónica, usualmente demuestran los parásitos
en que ellos sirven como portadores "sanos", no simular la provocada por T. vaginalis. Otras causas lación con el número de tricomonas y con el método móviles.
sospechados, y pueden transmitir el parásito sexual­ son: Neisseria gonorrhoeae, Gandida albicans, de laboratorio empleado. El Papanicolaou se ha usado como medio de
mente a otro individuo, el cual puede desarrollar Chlamydia trachomatis y Gardnere/la vagina/is, Los métodos directos consisten en la demostra­ tamiz de bajo costo, efectiv·o para detectar mujeres
infección sintomática y, por otro lado, los síntomas esta última de poca virulencia. Además, la tri­ ción de tricomonas móviles, principalmente en se­ con T. vagina/is y que, además, puede dar informa-
pueden aparecer en algún momento en el huésped comonosis está frecuentemente asociada a otros ··
creción vaginal y son: el examen directo, el cultivo ción adicional.
previamente asintomático. patógt,nos, por lo cuál la búsqueda de ellos es esen­ con uso de complejos medios líquidos o sólidos, el
En la mujer existen tres formas de presentación cial: bacterias, cándidas, lvfycoplasma hominis, cultivo celular y la inmunofluorescencia directa. Cultivo. Es la prueba diagnóstica más sensible
clínica: a) asintomática, b) subclínica y c) vulvova­ Ch/amydias y Ureoplasma 11realitic11111, entre los En la mujer, la muestra se obtiene en posición para la detección de tricomonosis. Este método
ginitis. principales. de litotomía, con la inserción de un espéculo no debiera ser incluido en la evaluación cuando el
La manifestación clínica más frecuente es la Cerca de un 20% de las mujeres con T. vaginalis lubricado en la vagina y por medio de una tórula se examen directo fracasa para identificar T. Pagina­
vulvovaginitis de evolución aguda o crónica. T. tiene disuria y éste puede ser el síntoma de presen­ aplica al fondo de saco posterior, la cual luego es lis. Tiene una sensibilidad de 97% con medios de
vagina/is es causa del 20 a 25% de las vulvovagi­ tación. La disuria revela una uretritis o cistitis trico­ rotada en una pequeña gota de solución salina sobre cultivo selectivos y de 98% con cultivos celulares y
nitis. El período de incubación varía de cuatro a monósica. T. vaginalis aparece asociada a una inci­ un portaobjetos y examinada inmediatamente. Se detecta parásitos con inóculos tan pequeños como
veintiocho días y los síntomas y signos comunes son dencia aumentada de endometritis posparto, siendo puede practicar, también, irrigación vaginal con 10 de una a cinco células por mL. Sin embargo, esta
la leucorrea, vulvitis, prurito vulvar y disuria. el doble que en mujeres libres de infección. mL de NaCl 0,9% estéril, por medio de una pipeta técnica es costosa, dificil, y no está disponible en
El cuadro clínico clásico descrito en la trico­ En relación a los signos y síntomas subjetivos, que luego es retirada para su cultivo o examen entre todas partes, pero da una ventaja al diagnosticar
monosis con la presencia de leucorrea de tipo puru­ entre mujeres con y sin tricomonosis, sólo hay dife­ lámina y laminilla. Muestras obtenidas del introito situaciones clínicas en las cuales puede haber un
lento y espumosa, e irritación vaginal como carac­ rencias significativas respecto a la presencia de leu­ vaginal, penniten una alternativa al examen con bajo número de tricomonas, tales como la uretritis
teristicas, está presente en una minoría de las mu­ correa espumosa, pero no en relación a otros sínto­ espéculo, especialmente en mujeres embarazadas. en el hombre o en estudios de hombres y mujeres
jeres y ha sido cuestionado en su sensibilidad y mas como disuria, descarga total (aguda o crónica), En el hombre, tanto el diagnóstico clínico como asintomáticos.
especificidad. calidad y cantidad de la descarga, leucorrea y pru­ de laboratorio es dificultoso y el parásito se debe
La descarga vaginal es el síntoma más frecuente rito vulvar. Además, ninguna de las siguientes va­ buscar en muestras de orina, de secreción uretral, Inmunolluorescencia directa (IFD). El adve­
y se describe sólo en la mitad de las pacientes con riables clínicas o epidemiológicas se ha observado en el líquido· espermático o en secreción prostática nimiento de anticuerpos monoclonales ha permiti­
tricomonosis y en la mayoría de ellas (70%), es de asociada en forma significativa con el diagnóstico obtenida por masaje de la glándula. do el desarrollo de técnicas de imnunofluorescenéia
presentación aguda, con duración menor de treinta de tricomonosis: la edad, frecuencia de coito, fecha altamente sensibles y específicas para la detección
días. Sin embargo, por examen fisico, se encuentra del coito más reciente, día del ciclo menstrual en el: Examen directo al fresco de secreción vagi­ directa de patógenos en muestras clínicas, usando
leucorrea en aproximadamente el 80% de las muje­ cual la paciente fue examinada y uso de antibióticos nal. Consiste en el examen de una muestra recién la técnica de IFD. El aislamiento de la T. vagillalis
res infectadas. recientes. Respecto al uso de métodos contracepti- obtenida de secreción vaginal colocada entre porta es más sensible y específico con esta técnica que con
300 PARASITOLOGIA MEDICA TRICOMONOSIS 301

el método directo, Comparado con el cultivo, tiene en animales, por lo que no debe usarse durante el nuir o eliminar la infección. Sin embargo, última­ BIBLIOGRAFIA
una sensibilidad de 80% y se requieren alrededor de primer trimestre del embarazo. Desafortunadamente, mente, T. tenax se ha identificado como agente causal
trescientas tricomonas por mL para ser positivo. Se los tratamientos de alternativa son menos eficaces. de triéomonosis pulmonar y se considera una infec­ Burtin P, Taddio A, Aribumu O, Einarson TR, Koren G.
ha planteado como una alternativa útil por su rapidez ción oportunista en pacientes portadores de cáncer, Safety ofmetronidazole in pregnancy: a meta-anallysis.
frente al cultivo. Prevención absceso o bronquiectasias. Mientras la interrogante Arn J Obstet Gynecol 1995; 172 (2 pt l); 525-9
de su posible patogenicidad es resuelta, se deben Eltabbakh GH, Eltabbakh GD, Broekhuizen FF, Griner
Reacción de polimerasa en cadena (PCR). Esta . Ya que la tricomonosis es contraída casi exclusi­ tratar estos casos con metronidazol. BT. Value of wet mount and cervical cultures at the
técnica ha demostrado ser útil, con una especificidad vamente a través del acto sexual, la infección en La prevención se logra a través de una adecuada time of cervical cytology in asymptomatic women.
de 100% y una sensibilidad para detectar T. vagina/is hombres asintomáticos o poco sintomáticos, debe higiene de la cavidad oral y evitando la exposición Obste! Gynecol 1995; 85 499-503
de 96%. No se han demostrado reacciones cruzadas, ser diagnosticada y tratada. Otras medidas profilác­ a la infección. Faro S. Vaginitis: diagnosis and management. Int J Fertil
con ADN humano u otros agentes infecciosos, in­ ticas consisten en impartir instrucción a la pareja en Menopausal Stud 1996; 41: 115-23
cluyendo Pentatrichomonas lzominis y Giardia relación a la infección y sus mecanismos de 'transmi­ TRICHOMONAS HOMINIS Herzberg AJ, Siverman JF. Detection of Tric/10mo11as
duodenalis. sión y efectuar un adecuado diagnóstico de labora­ vagina/is in endocervical and ectocervical smears.
El rol de los anticuerpos producidos durante la torio en todo individuo sintomático. Se conoce también como Pentatrichomonas Diagn Cytopathol 1996; 14: 273-6
respuesta inmune humoral en individuos infectados Pese a que la transmisión extravenérea es infre­ hominis. Este organismo ha sido asignado como JoesoefMR, Sumampouw H, Linnan M y cols. Douching
y la identificación de los antígenos contra los cuales cuente, es importante realizar, como medidas preven­ una especie del género Pentatrichomonas puesto and sexually transmitted diseases in pregnant women
están dirigidos, es una materia actualmente en estu­ tivas, un aseo cuidadoso de los elementos del baño, que la mayoría presenta cinco flagelos anteriores a in Surabaya, Indonesia. Am J Obstet Gynecol 1996;
dio. Existen anticuerpos anti-T. vagina/is de tipo evitar baños comunales y no compartir toallas o ropa diferencia del género Trichomonas con cuatro. Es 174 (1 pt 1): 115-9
IgA, IgM e IgG, y de estos tres tipos de inmunoglo­ interior con otras mujeres. un comensal del tracto intestinal del hombre, de Krieger JN. Trichomoniasis in men: old issues and new

li
bulinas, es evidente que la respuesta de tipo IgG es otros primates y de varios animales domésticos. data. Sex Transm Dis 1995; 22 83-96
predominante. TRICHOMONASTENAX En su morfología, difiere en algunos aspectos de Mirhagha�i A, Warton A. An electron microscope study
las Trichomonas: su tamaño es de 8 a 20 µm de
i'

La identificación de los inmunógenos clínicamente of the interaction between Trichomonas vagina/is il


significativos en la tricomonosis, contribuirá al co­ Es un flagelado de aspecto piriforme, que mide 5-· largo por 3 a 14 µm de ancho; uno de los flagelos and epitelial cells of the human amnion membrane. ¡¡
nocimiento de la interacción huésped-parásito y es 16 µm de longitud y 2-15 µm de ancho, con cuatro anteriores se origina y se mueve independientemen­ ¡! ¡'

Parasitol Res 1996; 82: 43-7 ¡:


un requisito para el desarrollo del inmunodiagnóstico flagelos libres de aproximadamente igual longitud y te de los otros y presenta un sexto, a lo largo de la Pearlman MD, Yeshar·c, Ernst S, Solomon W. An ,¡ 1
¡,
en la b4�queda de procedimientos más sensibles y un quinto sobre la membrana ondulante, la cual no membrana ondulante, el cual se continúa como un incremental doseng protocol for women with severe \!
de menor costo, por cuanto un aumento en la tasa de alcanza el extremo posterior del cuerpo. Presenta un largo flagelo libre. vaginal· trichomoniasis and adverse reaction to
diagnósticos correctos permite un tratamiento pre­ citostoma cerca del extremo anterior y en el lado Habita exclusivamente en el lumen del intestino metronidazole. Am J Obstet Gynecol 1996; 174: 934-
coz, prevención del inicio de los síntomas, disminu­ opuesto a la membrana ondulante, un grueso axostilo grueso y región cecal, sobreviviendo a las condicio­ 6 11
ción de la transmisión sexual y, por lo tanto, de la que se extiende una distancia considerable detrás nes ácidas del estómago. La transmisión del trofo­ Reynolds M, Wilson J. Is Trichomonas vagina/is still a
prevalencia de la enfermedad. del cuerpo; además, posee un núcleo ovoide con zoíto ocurre a través del consumo de alimentos o marker of other sexually transmitted infections in
escasos gránulos de cromatina y cariosoma excéntri­ agua de bebida contaminados con deposiciones o a women? INT J STD AIDS 1996; 7:131-2
Tratamiento co, y su citoplasma es finalmente granular. través de vectores mecánicos. Shaio MF, Lin PR, Liu JY. Colorimetric one tube nesled
T. tenax puede vivir solamente en la cavidad Su prevalencia está relacionada con deficientes PCR for detection of Trichomonas vagina/is in vagi­
El papel documentado en T. vagina/is como un bucal y aparentemente no sobrevive al pasaje a tra­ condiciones sanitarias del medio, con cifras que nal discharge. J Clin Microbio) 1997; 35: 132-8.
agente patógeno, plantea la necesidad de tratamien­ vés del tracto digestivo. Son protozoos comensales oscilan entre menos del ! y hasta 14%. La infección Witkin SS, Inglis SR, Polaneczky M. Detection of Ch/a­
to aun en el huésped asintomático. Un diagnóstico inocuos, que se alimentan de microorganismos y es encontrada más frecuentemente en climas cáli­ mydia trachomatis and Trichomonas vagina/is by
exacto de tricomonosis es, por lo tanto, un requisito detritus celulares, siendo más abundantes en indivi­ dos y en niños menores de diez años. polymerase chain reaction in introital specimens from
esencial para una adecuada terapia. duos con deficiente higiene bucal, ubicándose entre El diagnóstico depende de la identificación del pregnant women. Am J Obstet Gynecol 1996; 175:
El metronidazol es el tratamiento de elección en los dientes y encías, en cavidades de caries dentales parásito móvil en muestras de deposiciones diarrei­ 165-7
la tricomonosis urogenital. La dosis más efectiva es y criptas tonsilares. cas frescas. En deposiciones formadas, el organis­ Zhang ZF. Epidemiology of Tric/,omonas vagina/is. A
250 mg administrada tres veces al día por vía oral y La transmisión de T. tenax de un individuo a otro mo es dificil de identificar, porque se redondea y no prospective study in China. Sex Transm Dis 1996; 23:
en el caso de vaginitis, se debe agregar óvulos de es directa, por medio de las gotitas de Pflügge desde exhibe los movimientos característicos del estado .
415-24.
500 mg diariamente. El curso del tratamiento es de la boca, a través del beso y del uso común de utensi­ activo.
cinco a siete días. lios de comida y bebida contaminados. Este organis­ La prevención depende del saneamiento de la
Debido a la posibilidad de rápida reinfección, la mo es muy resistente a cambios de temperatura y comunidad y de la higiene personal.
pareja sexual debe ser tratada simultáneamente y es sobrevive varias horas en el agua.La infección es de
aconsejable la abstención de las relaciones sexuales amplia distribución en el mundo, con una prevalen­
durante el tratamiento. La terapia apropiada de la cia que varia entre O y 25%.
mujer con metronidazol cura entre el 60 y 80% de los El diagnóstico se hace por el hallazgo de tri­
casos, pero si el hombre es tratado al mismo tiempo, comonas, desde muestras obtenidas del tártaro entre
la tasa de curación alcanza un 95%. los dientes, desde los márgenes gingivales de las
Se ha comprobado resistencia de cepas de T. encías o de las criptas amigdalianas, mediante exa­
vagina/is al metronidazol y otros 5-nitroimidazoles, men directo o por cultivo en medios especialéi •
lo que puede explicar el fracaso terapéutico en algu­ No se requiere de tratamiento específico y sólo
nos casos. El metronidazol tiene efecto mutagénico está indicado mejorar la higiene bucal para dismi-
Capitulo33 AMIBAS DE VIDA LIBRE POTENCIALMENTE PATOGENAS 303

AMIBAS DE VIDA LIBRE


POTENCIALMENTE PATÓGENAS
BEATRIZ GOTILIEB

Definición. Las amibas de vida libre (AVL) de ción de la forma flagelada mediante la exposición
los géneros Naegleria, Acantlzamoeba y Balamuthia del trofozoito a agua destilada. El quiste es esférico,
son capaces de producir enfermedades en el hombre mide 8 a 12 µrn y posee una densa pared. El quiste
tales como la meningitis amibiana primaria (MAP) no se observa en la MAP.
y la encefalitis amibiana granulomatosa (EAG) que
se denominan "primarias" para diferenciarlas de la Acanthamoeba y Leptomyxida
diseminación de Entamoeba histolytica a partir de
Figura 33-1. Quistes de amibas de vida libre en cultivo (40x). A) Naegleriafowleri. B) Acanthamoeba spp. (Sr. Víctor
su localización intestinal hacia otros tejidos, que se Los trofozoitos de estas amibas son muy simila­ Muñoz, Chile).
denomina "secundaria". res y miden entre 15-35 µrn.El de Acanthamoeba
posee abundante citoplasma, mitocondrias, lisoso­
Biología. Estas AVL pertenecen al Reino Protis­ mas, ribosomas y vacuolas. Se movilizan por seudo­ de un foco primario de la piel, del aparato respirato­ Existe además, compromiso de meninges en la base
ta, Subreino Protozoa, a la superclase Rhizopodea. podios filamentosos (acantopodios)y su pared le da
Las patógenas para el hombre son del género Nae­ rio a partir de una neumonitis provocada por la amiba de los lóbulos frontal, temporal e hipotálamo. Cabe
una forma estrellada. Poseen un núcleo central con y además, por la vía nasal. destacar que este parásito aparentemente sólo inva­
gleria, Acanthamoeba y Balamuthia. Del género un nucléolo prominente y redondo. El quiste mide
Naegleria sólo se ha encontrado poder patógeno en Se presenta habitualmente en individuos con de el SNC.
entre 15-20 µrn y contiene una doble pared y se enfermedades crónicas, inmunocomprometidos y en Acanthamoeba sp. y Balamuthia mandrillaris
el SNC a N.fowleri. Del género Acanthamoeba pro­
forma cuando las condiciones del medio ambiente cualquier época del año,considerándose un parásito producen un cuadro de EAG que rnicroscópicarnente
vocan patología en el SNC A. astronyxis, A. pales­
no son las adecuadas. El trofozoito de Balamuthia "oportunista". presenta una encefalitis necrótica hemorrágica, múl­
ti11e11sis, en el SNC y los ojos a A. castellani, A.
culberstsoni, A. poliphaga y A. rhysodes y sólo de mandrillaris en su forma trofozoitica es más grande En individuos previamente sanos, además de la tiple y focal, asociada a una gran inflamación sub­
los ojos, a A. hatchetti. que el anterior pero el quiste es similar.El quiste MAP se puede presentar una queratitis por Acan­ aguda de células granulomatosas con presencia de
Estas amibas son capaces de vivir como parási­ posee una pared triple. thamoeba (QA). Esta queratitis se produce por la células multinucleadas. Además, se observa angeitis
tos y como organismos de vida libre, de alli que se acción directa de la amiba en la córnea, con el factor y arteritis necrotizante con necrosis fibrinoide. Cabe
denominen amibas anfizoicas. Están ampliamente Epidemiología agregado de trauma local asociado al contacto con destacar que se observan trofozoitos y quistes en
ubicadas en la naturaleza, encontrándose en el suelo, aguas contaminadas o uso de lentes de contacto las lesiones.
aguas y aire. La infección humana de estas amibas Naegleriafowleri tiene una distribución univer­ insuficientemente aseados o conservados en solu­ Acantlzamoeba sp. puede afectar el estroma cor­
se ha incrementado significativamente en los últi­ sal, se la ha aislado del suelo, polvo, aire, aguas ciones salinas no estériles o caseras. nea! luego de un pequeño trauma o abrasión del
mos diez años. frescas, piscinas y de muestras de la nariz de indivi­ epitelio cornea!. Los lentes de contacto también
duos aparentemente sanos. Patología pueden producir un trauma mecánico o hipóxico
Naegleria El trofozoito crece y se multiplica a temperatu­ que permiten la invasión de este parásito. La que­
ras de 40-45ºC. A menor temperatura, suele enquis­ N. fowleri ingresa al huésped a través del neu­ ratitis por Acanthamoeba se caracteriza por una
N. fowleri es la única patógena de su género y tarse y queda en los sedimentos de piscinas, ríos o roepitelio olfatorio. El trofozoito de la amiba puede inflamación del estroma cornea! agudo o crónico.
tiene tres estadios en su ciclo vital: trofozoito, flage­ lagos. estar presente en aguas contaminadas o puede ser Alrededor de los quistes amibianos y ocasional­
lado y quiste. En la forma de trofozoito mide aproxi­ Individuos jóvenes que se bañan en lagos, pisci­ inhalada a través del polvo o aire. Las células del mente trofozoitos, se observan polimorfonucleares,
madamente de 15-25 µrn. En cultivo son muy acti­ nas, o aguas contaminadas durante el verano, son los neuroepitelio olfatorio son capaces de una activa eosinófilos y linfocitos. Existe ulceración del epi­
vos y cambian constantemente de forma y tamaño. que suelen adquirir esta amiba. La vía de infección fagocitosis, atraviesan la placa cribiforme y llegan al telio cornea! y congestión conjuntiva!. No se han
Cuando .invaden el SNC se redondean y miden 8-12 seria la cavidad nasal a través de la natación o de la espacio subaracnoideo donde se multiplican y pro­ descrito lesiones en otras localizaciones en forma
µrn. El citoplasma es finamente granular y contiene liferan. De alli, penetran en el SNC produciendo simultánea.
inhalación de polvo.
necrosis hemorrágica y edema. El paciente presenta
múltiples mitocondrias, lisosomas y vacuolas. Se Acanthamoeba está ampliamente distribuida en
moviliza por lobopodios o pseudopodios. El núcleo a la microscopia un gran compromiso de la materia Sintomatología
la naturaleza en aguas oceánidas, lagunas, ríos, fil­
es central y contiene un nucléolo central denso y gris con meningoencefalitis aguda y encefalitis
tros de aire, polvo y en descarga nasal de individuos
esférico. En preparaciones histológicas, la cromatina necrotizante hemorrágica y con hallazgos de trofo­ N.fowleri produce una meningoencefalitis �­
sanos. Su temperatura óptima de crecimiento es de
nuclear aparece como un halo claro con el nucléolo zoítos en los espacios perivasculares, además de biana primaria (MAP), enfermedad aguda, fulmi­
25ºC y es muy resistente a la cloración del agua y a nante y que es rápidamente fatal. El paciente �uele
necrosis fibrinoide de los vasos sanguíneos. Se debe
central. La forma flagelada suele ser habitualmente la mayoría de los desinfectantes. Se ha encontrado destacar que sólo se encuentra trofozoitos en las ser un joven que, en época de verano, se bana en
biflagelada, aunqu�. oca�ionalmente puede contener una asociación con Legionella pneumophila, espe­ lesiones que son perivasculares. Macroscópicamen­ aguas contaminadas, lagos o piscinas temperadas.
más de diez flagelos··y ·constituye una etapa en que cialmente en aires acondicionados. La ruta de inva­ te, existe edema cerebral marcado, con congestión Luego de un período de in� u?ación de �-7 dí�s
la amiba no se alimenta.Se puede inducir la apari- sión del SNC de estas AVL es hematógena a partir _
severa y evidencias de hipertensión endocraneana. (dependiendo del tamano del moculo y la virulencia
304� PARASITOLOGIA MEDICA AMIBAS DE VIDA LIBRE POTENCIALMENTE PATOGENAS 305

de la amiba), presenta un comienzo agudo de cefa­ cerebral. Se debe realizar una punción lumbar con el tra agentes infecciosos. El ketonazol parece ser efec­ las charcas o piscinas con cloro, asociado al no bu­
lea frontal y temporal, fiebre elevada, signos menín­ máximo de cuidado para evitar la hemiación · del tivo tanto ilz vitro como in vivo en animales. Debe ceo en zonas sospechosas y la no introducción de la
geos con náuseas y vómitos explosivos y encefalitis. SNC. En la punción se observa una presión del LCR destacarse que dada la inmunodepresión del pacien­ nariz en estas aguas parecen ser medidas razonables
Suele presentar precozmente convulsiones y coma aumentada y existe pleocitosis y ausencia de bacte­ te, puede haber otras infecciones asociadas y que se para evitar contraer la MAP. En Australia se reco­
que Jo llevarán en pocos días a la muerte (alrededor rias. Se debe examinar• el LCR al fresco en el mi­ requiere habitualmente múltiples drogas simultánea­ mienda el uso de cloro en las piscinas de I mg/L para
de una semana). croscopio de luz corriente, con poca iluminación. Se mente lo que aumenta el riesgo de toxicidad y de temperaturas del agua inferior a 26ºC,de 2 ·mg!L
La punción lumbar revela un líquido cefalorra­ ,observa trofozoitos de amibas móviles que pueden ·interacciones de las diferentes modalidades cuando la temperatura excede de 26ºC. Dado que el
quídeo purulento con aumento de los polimorfonu­ fácilmente ser confundidos por macrófagos o célu­ terapeúticas. pronóstico de la MAP es muy grave, se recomienda
cleares y de proteínas e hipoglucorraquia, pero con las epiteliales para el observador inexpertó. El estu­ La queratitis por Acanthamoeba se trata con que se limpie con frecuencia el fondo y las paredes
cultivos bacterianos persistentemente negativos. dio del LCR al fresco es obligatorio para un diag­ soluciones oftálmicas al 0,02% de poli-hexa-rnenilen­ de las piscinas, se limite el número de bañistas,
Puede presentar además rinitis con alteración del nóstico precoz. Luego puede procederse a tinción de biguanida (PHMB). Algunos casos han sido trata­ mantener una adecuada corriente y disminuir la can­
olfato (parosmia) y alteración del gusto (ageusia). Si Giemsa o Wright; la tinción de Gram no es útil. La dos exitosamente con isotianato de propamidina al tidad de materia orgánica en el agua.
aparece compromiso del I, IV y VI pares craneanos, tomografía axial computarizada demuestra edema 0,1% asociado a polimixina B tópica, nitrato de La prevención de EAG es dificil porque la gran
indica que el edema cerebral ha progresado intensa­ cerebral. El estudio histológico postrnortem puede miconazol, gramicidina o neomicina. El uso de mayoría de las infecciones por Acanthamoeba sp. y
mente y que existe peligro de herniación. realizarse con tinción de hemotoxilina y eosina, corticoides tópicos debe usarse con precaución. Una B.mandrillaris ocurre en pacientes con inmunode­
Las otras AVL producen un cuadro más insidio­ inmunoperoxidasa o técnicas de inmunofluorescen­ queratoplastia penetrante y debridamiento se ha presión previa. Es aconsejable inspecciones periódi­
so, con cambios neurológicos en pacientes debilita­ cia. utilizado en algunos casos. Se ha descrito algunos cas de los estanques de agua caliente, filtros de aire,
dos y que se denomína Encefalitis Granulomatosa En el diagnóstico de la EAG, el estudio del LCR casos de queratitis por Acanthamoeba recurrente en sistemas de cañerías y filtros usados para purificar
Amibiana (EAG). Habitualmente, la infección provie­ puede ser de valor, pues demuestra pleocitosis con pacientes con trasplante de córnea, debido a la pre­ el suministro de agua potable, dado que son los
ne de los pulmones (precedido de una afección res­ linfocitosis y aumento de los polimorfonucleares. sencia previa de quistes en el estroma cornea!. De únicos sistemas conocidos como diseminadores de
piratoria baja) o de la piel y puede causar la muerte Existe un leve aumento de la presión del LCR, con allí, que es imperativo mejorar la queratitis antes de estas amibas.
luego de un curso crónico. El paciente presenta hipoglucorraquia. En el diagnóstico diferencial de la cirugía. Para prevenir la queratitis por Acanthamoeba,
cefalea, alteraciones de la personalidad, febriculas, este cuadro debe incluirse lesiones que ocupan es­ debe instruirse el uso de lentes de contacto con
convulsiones, hemiparesia, parálisis de nervios pacio como tumores (primarios o metastásicos), he­ Pronóstico precaución, el uso de soluciones estériles para des­
craneanos, alteración de conciencia y coma. No se morragia cerebral, infarto cerebral, tuberculoma o infectar los lentes, el lavado y desinfección de los
observa rinitis, parosmia ni ageusia. Luego de un lesiones por hongos en pacientes inmunodeprimi­ Es sombrío, debido a la acción patógena acelera­ lentes cada vez que ellos sean removidos, además
curso crónico, entre 8 a 30 días, el paciente suele dos. El diagnóstico debe basarse en el cuadro clíni­ da que provoca la AVL y a la tardanza en formular del lavado de manos cada vez que los lentes sean
fallecer. co, los exámenes de laboratorio y de radiología. La el diagnóstico. La MAP es más grave y de peor manipulados. Los lentes de contacto podrían no
El LCR es parecido al encontrado en la MAP, con resonancia magnética y la tomografla axial com­ pronóstico por su rápida evolución (no más de cua­ usarse durante la natación o cuando se realizan
la única diferencia que existe un predominio de putarizada son de escaso valor. El diagnóstico defi­ tro pacientes documentados sobrevivieron a MAP). deportes acuáticos.
linfocitos en lugar de polimorfonucleares. nitivo se realiza observando a las amibas en las LA muerte suele producirse luego de un cuadro
La queratitis por Acanthamoeba es una inflama­ lesiones cerebrales. Se puede utilizar la tinción de agudo fulminante, 4-6 días luego del comienzo de los
ción crónica de la córnea que puede producir una hematoxilina éosina, la de Gomori, la inmunope­ síntomas. BIBLIOGRAFIA
alteración seria de la visión, caracterizándose por ser roxidasa o anticuerpos inmunofluorescentes direc­ En cambio, el pronóstico de la EAG es algo mejor,
una queratitis de dificil manejo y resistente a los tos. dado que su evolución es más lenta. Si el tratamiento Anzil AA, Rao CH, Wrzolek M y cols. Amebic menin­
múltiples tratamientos. Se caracteriza por severo Acanthamoeba puede recuperarse de la córnea es iniciado tardíamente, se produce daño irreversi­ goencephalitis in a patients with AIDS caused by a
dolor ocular asociado con fotofobia, alteración de la mediante raspado cornea! o biopsias. ble, antes que la infección por AVL sea eliminada del newly recognized opportunistic pathogen. Arch Pathol
visión y congestión conjuntiva!. Existe una infiltra­ LCR. EL curso es subagudo o crónico (de semanas Lab Med 1991;115:21-5.
ción tipo anillo del estroma en 360º. Inicialmente Tratamiento a meses) y de no mediar tratamiento, es fatal en el Ferranta A. lmmunity to Aca11tha111oeba. Rev Infec Dis
puede confundirse con una queratitis por virus 100% de los casos. 1991;13: 403-9.
Herpes simplex. Diversas drogas han demostrado in vitro ser Debe tenerse en cuenta que la historia natural de Griesemer DA, Barton LL, Johnson PC y cols. Araebic
activas contra Naegleria, entre ellas: anfotericina B, queratitis por Acanthamoeba sin tratamiento, es la meningoencephalitis caused by Bala11111thia 111a11dri­
Diagnóstico miconazol, clotrimazol y rifampicina. Se ha demostra­ perforación cornea!, la vascularización de la córnea llaris. Pediatr Neurol 1994; 10:249-54.
do sinergismo entre anfotericina B y miconazol. con alteración de la agudeza visual e incluso en Martínez A, Visvesvara G. Free living amphizoic and
La MAP se debe plantear como diagnóstico di­ Anfotericina B es la droga más activa contra N. ocasiones la ceguera. Su curso es subagudo o cró­ opportunistic amebas. Brain Pathology 1997; 7:583-
ferencial de toda meningitis purulenta en que no se fowleri y es capaz de proteger al ratón de desarrollar nico y es de buen pronóstico si es adecuadamente 98.
encuentra bacterias en el Gram y cultivo y que no MAP si se la administra antes de inocular la AVL. Se tratada. Muñoz V, Reyes H, Astorga B y cols. Amibas de vida
mejora a pesar de un tratamiento antimicrobiano ha logrado tratamiento exitoso de esta infección con libre en hábitat de aguas dulces en Chile. Parasitol al
habitual. La MAP no puede diferenciarse clínica­ la administración de anfotericina B y miconazol Prevención Día 1993; 17:147-52.
mente de una meningitis bacteriana aguda. El diag­ endovenosa e intraventricular. Rideout BA, GardinerCH, Stalis IH y cols. Fatal infections
nóstico debe basarse en la correlación entre la clíni­ Hasta la fecha, no existe tratamiento efectivo N. fowleri es susceptible a I mg/L o menos de withBalamuthia 111andn'llaris (free living amoeba). Vet
ca, el laboratorio y los hallazgos radiológicos en el para la EAG. Acanthamoeba es poco sensible a las cloro. Por lo tanto, la descontaminación del agua de Pathol 1997; 34:15-22.
contexto de la historia del paciente y sus riesgos sulfas, otras drogas como el isotianato de pen­
épidemiológicos. tamidina o polimixina B tienen efecto inhibitorio,
El diagnóstico de MAP se realiza con la observa­ pero a altas dosis. Esta amiba es resistente a la
ción de los trofozoitos en el LCR o en el tejido mayoría de los fármacos usualmente utilizados con-
Capítulo34 F!LAR/OSIS 307

FILARIOSIS
CESAR NAQUIRA

1"1icrofilatias (b)
Snngrc Sangre
Biología Tejido cc1u1nr,subcutimco
Definición. Infección producida por nematodos Tejido celular subcutnneo
cuyos adultos se localizan en los vasos linfáticos
(Wuchereria ba11crofti y Brugia sp.), en el tejido Las filarias presentan los siguientes estadios HOMBRE
celular subcutáneo (Loa loa y Onchocerca volvulus) evolutivos: adulto, prelarva (microfilaria) y larva PICADURA PICADURA
y en las cavidades o tejidos periviscerales (Manso- (rhabditiforme y filariforme). Los dos primeros es­
11el/apersta11s y M ozzardi). Los estadios prelarvales tadios se desarrollan en el hospedero definitivo (el DIPTEROS
(microfilarias) se encuentran en la sangre o circun­ hombre) y el tercero, en el hospedero intermediario IIEMATOFAGOS
dando a los adultos. Es transmitida por insectos (los dípteros hematófagos) (Tabla 34-1). 111icr9fi1arias (e)
dípteros hematófagos. La patología y sintomatolo­ Los adultos presentan dimorfismo· sexual. La
gía es variable, dependiendo fundamentalmente de longitud varía entre los 20 y 40 mm en los machos Proboscis
la localización de los adultos y de la hipersensibi­ y hasta los 80 mm en las hembras. En el útero de las
lidad a los parásitos. hembras fecunélaélas, se desarrollan las prelarvas
Las filariosis son abordadas en su conjunto en (microfilarias).
este capítulo y se ha preferido que, dada su impor­ Las prelarvas o microfilarias presentan un cuer­
tancia en América Latina, la oncocercosis sea con­ po cilíndrico, alargado. Las especies W. ba11crofti,
siderada en forma separada (véase Capítulo 35: On­ B. malayi y L. loa poseen vaina, que es la cáscara
cocercqsis). del huevo que se ha alargado, mientras O. volvulus,

-�
Miisculos torácicos

CON VAINA SIN VAINA


Figura 34�2. Ciclo evolutivo de las filarias. Las filarias adultas tienen por hábitat los vasos linfáticos (Wuchereria
� � bancraj/i, Brugia sp.), el tejido celular subcutáneo (Onchocerca volvulus, Loa Loa) y tejidos periviscerales (Mansonella

� e <if!ii!i, sp.) (a). Los estadios de prelarva o microfilarias se encuentran en el tejido celular subcutáneo próximo al sitio dela
picadura (O. vo/vu/us) o en la sangre circulante (b). Los dípteros hematófagos se infectan al ingerir las microlilarias
(c). En los músculos torácicos de los vectores se producen y desarrollan las larvas (d), hasta formar las larvas
W. bancrofti (260 µ) O. v�lvulus (300 µ) filariformes o metacíclicas que migran a la proboscis del insecto (e) y constituyen las formas infectantes de los
parásitos.


•• <llJlí>_ ��
M, persta11s y M azzardi carecen de ella (Figura
34-1). Las microfilarias pueden medir hasta 300
µm y no presentan órganos reproductores desarro­
nueva picadura, para penetrar activamente por la
piel. El tiempo de desarrollo en el hospedero inter­
mediario, y vector al mismo tiempo, oscila de una
llados. a dos semanas. Las larvas que han logrado penetrar
D. perstans (200 µ) Los dípteros hematófagos susceptibles se infec­ y sobrevivir, alcanzan su hábitat definitivo; se des­
tan al succionar la sangre del hombre parasitado conocen las etapas de la evolución de las larvas en
B. ma/ayi (260 µ) el hombre, pero se presume que por vía sanguínea
con microfilarias circulantes ( W. bancrofti, B. ma­
layi, L. loa, M perstans y M. ozzardi), o con micro­ llegañ a la localización definitiva en las filarias de
filarias en el tejido celular subcutáneo próximo al hábitat linfático o visceral, o in si/u en las localiza­
sitio de la picadura (O. volvulus) (Figura 34-2). das en el tejido celular subcutáneo.
Las microfilarias ingeridas evolucionan en el El estadio adulto se logra aproximadamente entre
díptero, atraviesan la pared estomacal y alcanzan los seis meses y un año, al cabo del cual, se inicia
� los músculos toráxicos donde llegan al estadio de la puesta de las microfilarias. Las microfilarias de
Loa loa (21 O µ) M. ozzardi (200 µ) larva. En la musculatura del tórax, las larvas sufren W. bancrofti y de B. malayi son más abundantes en
:.,·· ,, dos mudas antes de alcanzar el estadio de larva la noche (periodicidad nocturna); en cambio, las de
filariforme o metacíclica, que migra a la proboscis L. · loa lo son en el día (periodicidad diurna); sin
Figura 34-1. Disposición de la envoltura cuticular de las microlilarias. del insecto y lo abandona en el momento de una embargo, se señalan áreas endémicas en las cuales
308 PARASITOLOGIA MEDICA FILARIOS/S 309

TABLA34-I Ecuador); M. perstans (zonas de Panamá, Trinidad, comienzo, es frecuente la linfangitis en las extremida­
CARACTERISTICAS DE LAS ESPECIES FILOROIDEA, IMPORTANTES PARA EL HOMBRE Surinarn, Venezuela, Guyanas, Brasil y Norte de des y en los genitales, con destrucción de gusanos
Argentina); M. ozzardi (áreas de Guatemala, Méxi­ adultos; pero, en ciertos pacientes, la repetición de
Adulto Microfi/aria Vector Distribución co, Panamá, Puerto Rico, Guyana, Venezuela, Co­ varios episodios inflamatorios ocasiona una fibrosis
geográfica: lombia, oriente del Perú, Brasil y Norte de Argenti­ en los vasos linfáticos que terminan en su obstruc­
región na), Brugia guayanensis es la única especie de ción completa. En algunos casos, la presencia del
Tiempo tropical y Brugia descrita en Sud América en casos humanos parásito no produce importantes reacciones en los
Loca- Perio- Especie de subtropica/ de Colombia y Perú; el parásito ha sido hallado en vasos linfáticos.
Tamaño lización Presencia dicidad importante desarrollo de: el coatí (Nas11a nasua), paras ita los vasos y nódulos
linfáticos, produciendo inflamación y agrandamien­ Ma11s011ella persta11s. Los adultos se encuen­
Wuchereria 40x0, I I mm Vasosy Sangre Nocturna Cule.r 14 - 15 días Asia, Africa, to ganglionar. En Norte América se han comunica­ tran principalmente enquistados en el tejido
bancrofti 83x0,24 rmn ganglio (no en el quinquefas- Américay do casos humanos de filariasis por Bntgia /epori retroperitoneal, con escasa reacción tisular.
linfáticos Pacifico Sur) ciatus Oceanía y Brugia beaveri. La infección producida por L. loa
(fatigans) fue importada de Africa a América, sin haberse, Ma11s011ella ozzardi. Los adultos tienen una
Aedes aparentemente, aclimatado. localización similar a M. pertans y hay también uria
poly11esie11sis Se cqnsidera al hombre como el hospedero defi­ escasa reacción tisular.
nitivo habitual de las filarias estudiadas, aunque es
Br11gia 23x0,09mm Linfáticos Sangre Nocturna Mansonia sp. 6-7días Sur de Asia probable que, para la M. ozzardi, lo sea también el Sintomatología
ma/ayi 55x0,16 mm No descrita mono. La mayor parte de las personas parasitadas
en América son aborígenes o residentes antiguos de las zonas W11clzereria ba11cojti. La infección es conocida
Loa loa 30x0,35 mm Tejido Sangre Diurna Crysops 10 - 12 días Africa endémicas. Los hospederos intermediarios y vectores con los nombres de wuchereriosis, filariasis de
55x0,45 mm celular dimidia/a No descrita de las filariosis pertenecen a diversos géneros y Bancrofti o elefantiasis. Según la evolución de la
subcutáneo C,ysops en América especies de dípteros, cuya presencia y abundancia infección, se distinguen tres tipos de filariosis pro­
si/acea dependen de condiciones del ambiente, tales como vocados por W. bancrofti:
Onchocerca 30x0,13 mm Tejido Tejidos Ninguna Simu/ium 8 - 9días Africay la temperatura, la humedad, el régimen de lluvias, los Asintomática: es frecuente en las áreas endémi­
volvu/11s IO0x0,36 mm celular vientos, la vegetación, las corrientes de agua, etcé­ cas y en la población infantil; a veces, se encuentra
damnosum América
subcutáneo S. ochraceum (Central y tera. un agrandamiento de los ganglios linfáticos.
S. neavi del Sur) La forma infectante de las filarias es la larva I,iflamatoria aguda: es el cuadro clínico más
S. ca/idum filariforme metacíclica. La vía de infección es la piel frecuente. Se observa linfangitis de las extremidades
S. metal/ic11111 y el mecanismo de transmisión se produce a través o de los genitales, con fiebre y compromiso del es-
S. exig11um de la picadura. Cuando por una transfusión sanguí­ tado general.
nea o a través de la placenta, llegan microfilarias al Obstmcción, crónica o elefantiasis: es la forma
Mansone/la 40x0,80 mm Mesenterio, Sangre Ninguna Culicoides 7- 9dias Africay torrente sanguíneo de una persona, dichas clínica menos frecuente y aparece luego de varios··
perstans 70x0,l3 mm tejido peri- austeni América del microfilarias pueden permanecer circulando por episodios agudos de la enfermedad. La fibrosis de
rrenal y Culicoides Sur años, sin poder continuar su evolución hasta no los vasos línfáticos lleva el edema de los territorios
retroperito- grahami ser ingeridas por el hospedero intermediario sus­ correspondientes, generalmente los miembros infe­
nea! ceptible. riores o los genitales, con alteraciones tróficas de la
Mansone/la 38x0,20 mm Mesenterio Sangre Ninguna C11/icoides 7- 9días América Las filariosis constituyen, en general, problemas piel y endurecimiento del tejido celular subcutáneo.
ozzardi 80x0,25 mm cavidades J11rens Centraly de salud regionales, por corresponder las zonas Es frecuente observar las siguientes formas de
corporales América del endémicas a focos con caracteres ecológicos muy linfoedemas: linfoedema escrotal, hidrocele, linfo­
Sur diferenciados, selváticos o rurales, provocando una edema de las extremidades y quiluria. La diferencia­
disminución del estado de salud y de la capacidad de ción clínica entre linfoedema y elefantiasis es fre­
la población parasitada. cuentemente dificil y a los dos se les agrupa juntos.
El esquema de clasificación recomendado por la OMS
Patología señala:
las microfilarias no tienen periodicidad (Pacífico Epidemiología a) linfoedema grado I, que puede ser reversible;
Sur para W. bancrofti y zona oriental de la penín- Se abordarán sólo las especies existentes en b) /infoedema grado JI, con fibrosis y no espon­
sula Malaya para B. malayi). Los factores condi- Las filariosis están distribuidas en áreas tropica- América. táneamente reversible, y
cionantes de la periodicidad de las microfilarias no les y subtropicales. c) linfoedema grado III, al que se agregan derma­
están aclarados; sin embargo, el aumento de la pre- Las especies de filariosis más importantes en W11c/1ereria ba11crofti. Los gusanos adultos, toesclerosis y vegetaciones papilomatosas.
sión del oxígeno en los pulmones y el mayor ejer- América son: W. bancrofti (islas del Caribe, inclu- vivos o muertos, ocasionan la inflamación y aun la
cicio durante el día, favorecerían la migración de yendo Cuba y Puerto Rico, noroeste de Brasil, Gu- obstrucción de los vasos linfáticos, que se agrava Ma11s011ella perstans y M. ozzardi. La mayoría
las microfilarias a los vasos,pulmor1�res, y disminu- . __ yanas y algunas áreas de Venezuela y de Colom­ por la reacción inflamatoria o granuloma pseudo­ de las personas infectadas tolera bien los parásitos,
yeñ en la circulación periférica. Los ·adültos pueden · · biá); · O. volvulus (áreas de México, Guatemala, tuberculos_o que Sf:l desarrolla alrededor de los gusa­ aunque se señalan reacciones alérgicas atribuibles
persistir en el organismo por muchos años. Colombia, noroeste de Venezuela, de Brasil y de nos; los vasos linfáticos se vuelven varicosos, pro­ a la microfilaremia o a los adultos, y eosinofilia ·
vocando edema en el territorio correspondiente. Al elevada.
310 PARASITOLOGIA MEDICA F/LARIOS/S 311

Diagnóstico génesis de las hembras y, por consiguiente, la pos­ toria. De tiempo en tiempo, suelen presentarse áreas tissue sections. Human Paathol 1984; 15: 514-25.
tura de rnicrofilarias. edematosas en la cara o en el cuero cabelludo (hin­ Kozek WJ, Reyes MA, Ehnnan J, Garrido F y cols.
Métodos directos El medicamento más usado es la dietilcarbama­ chazones Ca/abar), que reaparecen en diferentes EnzooticB111gia infection in a two years-old colombian
zina, altamente efectiva como microfilaricida. Tie­ localizaciones, sin llegar a supurar. En algunos girl. Am J Trop Med Hyg 1984; 33: 65-9.
Se basa en la demostración de las rnicrofilarias ne pocos efectos laterales en la filariosis por W. pacientes se han encontrado hasta cuarenta gusa­ Orihel TC. Brugia guayanensis sp. n. from the coatimundi
de la sangre ( W. Bancrojii, B, malayi, L. loa, M. bancrojii, siendo mayor la intolerancia en las infec­ nos. Ocurre en especies de monos, en las que sus in British Guiana. J Parasitol 1964; 50: 115-8.
perstans y M. ozzardi). Las rnicrofilarias presentan ciones por Brugia spp. También es el fármaco de larvas presentan periodicidad nocturna. En el hom­ Orihel TC, Eberhard mL. Mansonel/a ozzardi: a re­
dos características importantes para el diagnóstico: elección en las infecciones por L. loa. bre, en cambio, la periodicidad es diurna. El desa­ description with comments on its taxonomic rea­
la morfología propia de cada especie y la periodici­ rrollo se hace en tábanos del género Cluysops. tionships. Am J Trop Med Hyg 1982; 31: 1142-7.
dad o no de las mismas, según la especie involucrada. Quirúrgico. Elefantiasis. Se ha intentado con Orihel TC, Beaver PC. Zoonotic Brugia infections in
En las filarias de periodicidad nocturna, la muestra éxito parcial el vendaje compresor y la anastomosis North and South America. Am J Trop Med Hyg 1989;
puede tornarse entre las I O p.m. y las 2 a.m.; y las de los linfáticos. BIBLIOGRAFIA 40: 638-47.
de periodicidad diurna entre las 10 a.m. y las 2 p.m. Ro JY, Tsakalakis PJ, White VA. y cols. Pulmonary
El diagnóstico mediante la demostración de los ejem­ Prevención Baird JK, Alpert LI, Friedman R y cols. North American dirofilariasis: the great imitator of primary ar
plares adultos es poco frecuente. brugian filariasis: report ofnine infections ofhumans. metastasic lung tumor. A clinicopathologic analysis
Se recomienda tornar la muestra de sangre del Se basa en: Am J Trap Med Hyg 1986; 35: 1205-9. of seven cases and a review. Human Pathol 1988; 2Ó:
lóbulo de la oreja y usar técnicas de concentración a) El control de los dípteros hematófagos, ya sea Goodwin LLG, Ottesen EA, Southgate BA. Recen! 69-76.
(Método de Knott o de filtración por membrana). por medio de la acción sobre sus focos de reproduc­ advances in research on filariasis. Trans R Trap Med Sasa M. Human Filariasis in a Global Survey of Epide­
ción o mediante la protección de la vivienda con Hyg 1984; 78: 1-28. miology and Control. Baltimore, Maryland: Univer­
Métodos indirectos insecticidas u otros medios. Gutiérrez Y. Diagnostic features of zoonotic filariae in sity Park Press, 1976.
b) El diagnóstico y tratamiento de las personas
lntradermorreacción. Se utiliza como antíge­ infectadas principalmente con dietilcarbamazina.
no el extracto de Dirofilaria immilis (filaria del c) La educación para la salud, dirigida al cono­
perro), que tiene especificidad de grupo para las cimiento del problema por la población y al uso de
filarias del hombre; por presentarse reacciones cru­ las medidas de protección individual y colectiva.
zadas con otras infecciones, sería de utilidad en los
estudios epidemiológicos. OTRAS FILARIOSIS

Reacciones serológicas. Se usan diferentes an­ Entre las especies específicas del hombre, se
tígenos y las pruebas más usadas son las reacciones mencionan además, Brugia malayi y Loa loa, que
de fijación del complemento, la hernaglutinación, producen síndromes llamados filariosis malayi y
la floculación de la bentonita, la aglutinación, la Ioaosis. Existen otras filarias específicas de los ani­
precipitación y la inrnunofluorescencia indirecta. males que suelen, ocasionalmente, infectar al hom­
De ellas, la fijación del complemento, la hernagluti­ bre y determinar patología. Entre las más comunes
nación y la inrnunofluorescencia son las más exten­ se citan especies del género Dirofi/aria: la Filaria
samente usadas. La técnica de ELISA se está ensa­ conjuntivae y la W11c/1ereria vauceli.
yando con prometedores resultados. Actualmente
se está prestando atención a técnicas que permitan Fi/ariosis malayi. La Brugia malayi se ha en­
detectar antígenos circulantes. contrado en el Lejano Oriente y, especialmente, en
la India, Ceilán, China, Indonesia, Vietnam y Mala­
Eosinofilia. Es observada con frecuencia en las sia. Ocurre en zonas rurales por los hábitos de los
filariosis y, especialmente, en la infección produci­ insectos vectores (Anopheles sp o Mansonia sp), y
da por M. perstans. los hospederos definitivos son varias especies de
monos de las forestas pantanosas y los gatos. En
Proteinograma. No es específico: en la wuchere­ zonas endémicas de la B. malayi, es frecuente el
riosis se ha demostrado un aumento de las garnrna­ Síndrome de Eosinofilia Tropical, que se atribuye a
globulinas con un incremento de la IgG e lgE. La un estado de sensibilización alérgica producido por
determinación de la IgE específica ha mostrado ser anteriores infecciones filariósicas.
útil en el diagnóstico.
Loaosis. Es producida por el Loa loa y se en­
Tratamiento cuentra en el hombre en Africa Central. La hembra
adulta mide de 5 a 7 cm de longitud y el macho de
Medicamentoso. Actualmente se cuenta con 2 a 3 cm. Viven en el tejido conectivo y migran por
medicamentos que tienen acción preferente contra debajo de la piel y de las mucosas, inclusive de la
los helmintos adultos (macrofilaricidas), contra las coajuntiva ocular (gusano ocular), sin provocar en
larvas (microfilaricidas), o que inhiben la ernbrio- apariencia, lesión traumática ni reacción inflama-
Capítulo 35 ONCOCERCOSIS 313

ONCOCERCOSIS (ENFERMEDAD DE ROBLES) Epidemiología

La oncocercosis tiene una amplia distribución


FRANCISCO J. AGUILAR geográfica en Africa, Asia y América Latina.
A/rica: Al sur del Sahara, en una ancha faja ql}e
va de oeste a este, entre los 15° L.N., hacia Senegal
y Etiopía y al sur de la línea ecuatorial 10° L.S., desde
Angola a Tanzania. Además de los países menciona­
dos se encuentra en Sudán, Guinea, Costa de Marfil,
Definición. Infección producida por el nemato­ Biología Liberia, Sierra Leona, Ghana, Benin, Alto Volta,
do filárido 011chocerca volv11/11s, transmitida por Camerún, Región Ecuatorial Española, Nigeria,
insectos dípteros del género Sim11/i11111. Las filarias La 011chocerca volv11/11s es una filaria de color Uganda, Chadd, Zaire, Kenya, TÓgo y la Unión de
adultas se localizan en nódulos fibrosos subcutá­ blanco-opalescente (Figura 35-I A). El macho mide ,-,.. Repúblicas Democráticas del Africa Central. Trans­
neos y las microfilarias en la dermis y diversas 19 a 45 mm de largo (2 a 5 cm) por 100 a 200 µm i,:\::�.¿.;�{:¼t:. misores; Simulimn damnosum y S. neavei.
partes del ojo, provocando lesiones graves que pue­ de ancho, cutícula estríada sin espesamientos, ex­ Asia: Yemen, sur de Arabia.
den llegar a la ceguera. tremidad caudal con dos espículas curvas y estriadas. Figura 35-2. Microfilarias de 011chocerca volvulus. América: México (dos Estados): Oaxaca y Chia­
Sinónimos: Onchocerciasis, Volvulosis, Cegue­ La hembra mide 33 a 50 cm de largo por 270 a 400 pas. Transmisor principal: S. oc/zraceum.
ra de los ríos tropicales. µm de ancho, cutícula estriada con espesamientos Guatemala: 24 municipios de 7 departamentos:
característicos; vulva a 600 µm de la extremidad Huehuetenango, Sololá, Suchitepéquez, Escuintla,
anterior; tiene dos úteros llenos de huevos y em­ Guatemala, Chimaltenango y Santa Rosa. Transmi­
briones. Los huevos son ovoides y miden 45 a 60 sor principal: S. ochraceum.
µm de largo por 30 a 35 µm de ancho. Los embriones Venezuela: (9 Estados): Anzoátegui, Aragua,
o microfilarias salen por la vulva y se les encuentra Carabobo, Cojedes, Guárico, Miranda, Sucre y Yara­
en los nódulos subcutáneos, espacios linfáticos, cuy, y el Territorio Federal Amazonas, ·vertiente ve­
diversas partes del ojo, líquido cefalorraquídeo, nezolana de la Sierra Parirna. Transmisores principa­
hígado, riñón y orina. La producción de microfilarias les: S. metal/icum, S. pintoi, S. exiguum y S. amazo­
ha sido calculada en alrededor de un millar diario nicum.
por hembra. Colombia: Departamento del Cauca (foco río
Micay). Transmisor principal: S. amazonicum.
Ciclo evolutivo (Figura 34-2). Las hembras y ma­ Ecuador: Provincia de Esmeraldas (ríos, Santia­
chos de O. volvulus viven estrechamente entrelaza­ go, Onzole y Cayapas). Transmisor principal: S.
dos en nódulos fibrosos, por lo general subcutáneos exiguum y S. quadrivitatwn.
(Figura 35-IB y C). Después de la fecundación, las Tanto en Africa como en América Latina, las··
microfilarías se abren paso por el tejido nodular, zonas oncocercosas son áreas de importantes culti­
pasan al tejido celular subcutáneo, diversas partes vos, especialmente de café, en donde los altos índi­
del ojo, dermis, vísceras, etc. Las hembras de algu­ ces de prevalencia e incidencia de enfermedad de
nas especies de simúlidos al picar a una persona Roles, al disminuir la capacidad para el trabajo son
portadora de microfilarias, dilaceran una porción de causa de fuerte impacto económico social, aumenta­
la piel hasta que abren un pequeño vaso sanguíneo; do por el significativo número de pacientes que
chupan la sangre liberada y con ella, las microfilarias pueden llegar a la ceguera.
que se encuentran en el lugar de la picadura. Algu­
nas de estas microfilarias atraviesan las delgadas Patología, patogenia y sintomatología
paredes del proventriculo del insecto y llegan a los
músculos del tórax en donde sufren dos mudas La oncocercosis es una infección crónica del
("presalchicha" y "salchicha") convirtiéndose en tejido celular subcutáneo, la piel y los ojos, debido
microfilarias metacíclicas infectantes al cabo de 1O a a la presencia de vermes adultos y microfilarias y a
12 días. Cuando el simúlido vuelve a picar para hacer la reacción alérgica del hospedero. La triada
otra toma de sangre, las microfilarias metacíclicas sintomática está constituida por nódulos (onco­
dejan la boca del insecto y por la vía que éste ha cercomas), lesiones de la piel (oncodermitis) y lesio­
hecho en el nuevo hospedero, llegan al tejido celular nes oculares (oncoftalmía).
subcutáneo, crecen, por lo general emigran, y se Los nódulos u oncocercomas se localizan en el
3- hacen adultos en ocho a doce meses. Al detenerse tejido celular subcutáneo (Figura 35-3), pero puede
Figura 35-1. Onc/wcerca 1•a/¡,11/11s. A) Oncocercomas de diversos tamaños, extraídos de pacientes infectados. B) con otros machos y hembras en la misma fase de haber subaponeuróticos, yuxtarticulares, adheridos al
Oncocercomas seccionados:,la parte,central muestra las<filarias,a:dultas entrelazadas. C) Oncocercomas sometidos a desarrollo, el tejido ambiente reacciona y seforma el periostio y hasta en fosas excavadas en el hues�;
digestión artificial, con hembras·y machos de O. voll'ulus en forma de ovillo. D) Macho y hembra de O. ¡,o/vulus .,· nódulo oncocercoso, dentro del cual machos y hem­ también sé les ha encontrado en los pulmones. Miden
aislados del material obtenido por digestión artificial. bras copulan y continúa el ciclo. 1 a 2 cm de diámetro, pudiendo llegar hasta 5 y 8
. 314 PARAS/TOLOG/A MEDICA ONCOCERCOS/S 315

cuentra microfilarias en la dermis y tejido celular sas y pruriginosas en la cara, tórax y miembros. Se
subcutáneo. considera como una reacción alérgica producida
Las lesiones oculares u oncoftalmia es la loca­ por la muerte de microfilarias y su especificidad
lización más grave de la oncocercosis, ya que pro­ Uega al 90%.
duce pérdida de la visión y ceguera. Se consideran
como lesiones oculares, en que se ha comprobado la Tratamiento
presencia de microfilarias, las siguientes:
'Segmento anterior. Córnea con opacidades lon­ Se utilizan métodos quirúrgicos destinados a la
gitudinales o puntiformes, inflamación aguda (que­ extirpación de los nódulos u oncocercomas y méto­
ratitis), atrofia del iris, iridociclitis y catarata secun­ dos quimioterápicos mediante la administración de
daria. drogas antiparasitarias. Ambos métodos son com­
Segmento posterior. Atrofia del epitelio pig­ plementarios.
mentario de la retina, esclerosis de la coroides y
atrofia óptica. Quirúrgico. La desnodulización se practica con
Figura 35-3. Nódulo subcutáneo de Onchocerca volvulus, anestesia local y con los cuidados de asepsia y
Las lesiones de la visión llegan al 60% y la
corte histológico. (Cortesía del Dr. R. Céspedes, Costa antisepsia de rigor. Debe efectuarse, cuando menos
Rica). ceguera total va del 2 al 5%, pero en las zonas
hiperendérnicas puede llegar al 30%. dos veces por año y está comprobado su efecto fa­
Además, se han descrito otras localizaciones del vorable en la prevención de la ceguera. La dificul­
cm. En Africa, se localizan principalmente en el O. volvulus; encontrándose hembras adultas en la tad de localizar nódulos profundos no permite apli­
tronco, muslos y brazos; en América, en cambio, pared de la aorta y microfilarias en hígado y riñón. car este procedimiento a un grupo importante de
predominan en la cabeza, hombros y tronco. El nú­ La enfermedad de Robles tiene un período de pacientes, que puede ser del 20 al 30% del total de
mero· de nódulos por paciente es de tres a seis, pero incubación que va desde los 6 meses a un año, oncocercosos, siendo por ello insuficiente.
se ha encontrado casos hasta con 150; casi siempre durante el cual hay eosinofilia poco elevada y brotes
son indoloros, no adherentes a los planos profun­ de urticaria. La aparición de los nódulos es insidio­ Quimioterapia. Se han ensayado varias drogas,
dos y de una consistencia dura característica. El sa y causa pocas molestias. En los períodos agudos algunas en inyecciones intranodulares y otras por
aspecto histológico del oncocercoma depende de su hay reacción general con fiebre, malestar y acentua­ vía oral, subcutánea, intramuscular o endovenosa..
edad y tamaño (Figura 35-IC); los más recientes ción de la sintomatología cutánea y ocular; en el Dietilcarbamazina (Hetrazán®). Derivado de la
muestran reacción inflamatoria inicial, con dilatación cuadro hemático, la eosinofilia puede llegar del 20 piperacina (dietilendiamina). Se administra por vía
vascular y después reacción granulomatosa de cuer­ al 70%. Los sintomas oculares van de fotofobia, oral a la dosis de 1 O mg k/p, diariamente, dividida
en tres tomas posprandial, durante IO a 21 días. 1 !
po extraño alrededor de los vennes, con granuloci­ blefarospasmo y sensación de cuerpo extraño, a otros
tos, células endoteliales y a veces células plasmáti­ más graves como conjuntivitis hiperémica, querati­ Tiene marcada acción microfilaricida, pero no so­
cas y linfocitos; las microfilarias se encuentran en tis, iritis y, finalmente, ceguera por las lesiones en bre los vermes adultos. Por ello, las microfilarias
los nódulos, en los tejidos vecinos y en las diversas la cámara posteriór. Los trastornos cutáneos se van T reaparecen 3 a 6 semanas después de terminado el ··
partes de los ojos. Los oncocercomas antiguos pre­ acentuando a medida que ocurren los brotes sucesi- tratamiento. Ocasiona fenómenos alérgicos: prurito
sentan fibroblastos con colágena gris-blanquecina vos o por reinfecciones. · intenso, edema, urticaria, etc., que pueden aliviarse
en la periferia y en la parte central se agrupan los Aunque no compromete la vida del paciente, el con cortocosteroides. También se ha utilizado en
gusanos entrelazados, en una porción más suave, pronóstico de la oncocercosis es grave por las lesio­ forma de pomada para aplicación en la piel.
amarillenta y grumosa. Por traumatismos o infeccio­ nes oculares que puede ocasionar, éstas se obser­ Surami11a (Bayer® 205, Foumeau® 309, Ger­
Figura 35-4. Grupo de niños con oncocercomas en la manina® o Moranyl®). Es la sal sódica de la urea
nes pueden sufrir fibrosis, caseificación o calcifica­ van entre el 30 y el 60% de los casos. cabeza (la localización cefálica llega en Guatemala al
ción. simétrica. Se administra por vía endovenosa, con
60%). intervalos de 4 a 7 días, disolviendo un gramo del
Las lesiones de la piel u oncodermitis son de Diagnóstico
tipo irritativo o alérgico. Se presentan por brotes medicamento en 10 cm' de agua destilada. La dosis
agudos constituyendo la erisipela de la costa, con Se basa en la sospecha clínica y en el uso de Diagnóstico indirecto (inmunodiagnóstico). Se inicial será solamente de 0,3 a 0,5 g para estudiar
edema y enrojecimiento de la cara y miembros, métodos de diagnóstico directo o de certeza e indi­ utiliza antígenos obtenidos de Onchocerca volvu­ la susceptibilidad del paciente. Las dosis sucesivas
acompañada de malestar general y fiebre. La repe­ rectos o inmunodiagnóstico. lus, O. cervicalis, O. gu//urosa, Dirofilaria immitis serán de 1 g hasta completar 7 a 1O g. En los niños,
.tición de brotes agudos da lugar a modificaciones o Lilomosoides carinii. Se han ensayado las siguien­ las dosis son proporcionalmente menores conforme
crónicas de la piel; denominado mal morado por el Clínico. Por la presencia de nódulos, manifesta­ tes ténicas: reacción de fijación del complemento, a peso y edad. El Moranyl®, producto francés, se
color que va tomando. Además, puede haber aspe­ ciones cutáneas, lesiones oculares y eosinofilia. Los intradermorreacción, apticuerpos fluorescentes, administra por vía intramuscular profunda. La
reza de la piel debido a un aumento de la capa nódulos deben diferenciarse de ganglios linfáticos, hemaglutinación indirecta, ELISA, electroforesis, suramina ocasiona la muerte de los vermes adultos
córnea, con disminución de las secreciones cutá­ quistes sebáceos y osteomas. Tomar en cuenta si el precipitación con gel-agar, radioisótopos e investi­ y pequeña disminución de las microfilarias circu­
neas (xerodermia), paquidermia, aspecto leproide, paciente procede de área endémica. gación de anticuerpos en las lágrimas. lantes; las lesiones oculares son irreversibles, pero
especialmente en las orejas; prurito con liquenifica­ .l hay mejoría de la visión después del tratamiento.
ción y dennatitis eccematoide con lesiones pápulo­ Directo o de certeza. Al comprobar presencia Test de Mazzotti. Se basa en la aparición de Debe vigilarse la presencia de elementos anormales
vesiculosas, excoriadas, a veces impetiginosas ,o, de filarias adultascen los-nódulos extirpadoihl·de prurito palmar y plantar en los enfermos que ingie­ en la orina, ya que puede producir daño hepatorrenal
papilomatosas en los brazos, manos y nuca. En los microfilarias en las biopsias cutáneas o eri la· linfa ·i ren 0,5 mg de dietilcarbamazina (Hetrazán) por kilo que obliga a suspeder el tratamiento.
cortes histológicos de la piel oncocercosa, se en- dérmica obtenida por escarificación. de peso. En algunos casos_ hay reacciones edemato- lvermectina (Mectizán®). Registrado en 1987
ONCOCERCOS/S 317
316 PARASITOLOGIA MEDICA

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.
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visita a las zonas endémicas y en caso necesario, findings. Am J Trap Med Hyg 1993; 48: 14-9.
usar vestimenta adecuada (mangas largas, botas y Njoo FL;'Bélling AG, Costiíigiy éóls. Goncurrentparasitic
guantes), así como el empleo de repelentes: indalona, infections in Onchocerciasis and the ocurrence of
rugersftalato de metilo, etcétera. adverse reactions after ivermectin treatrnent. Am J
Capítulo36 TRIQUINOSIS 319

TRIQUINOSIS que puede observarse con una lupa o con un micros­


copio de poco aumento. Tiene un aspecto fusifonne
o alargado, que recuerda la forma de un limón, y
ANTONIO ATIAS contiene, enrollado en su interior, una o varias lar­
vas de triquina (Figuras 36-3 y 36-4 y Lámina 29).
La invasión de la musculatura esquelética por
las larvas, comienza alrededor del séptimo día de
ocurrida la infección y continúa mientras existan
hembras grávidas en el intestino. Al cabo de un
Definición. Infección parasitaria producida por - Trichinel/a spiralis, propia de zonas geográ­ mes, las larvas completan su encapsulamiento y a
nematodos del género Trichinella, transmitida por ficas templadas y sin duda la especie más importan­ los seis meses, se inicia el depósito de calcio en las
carnivorismo, y caracterizada por un síndrome fe­ te en el ciclo evolutivo doméstico, en el cual está paredes del quiste. La calcificación total se alcanza
bril, signos oculopalpebrales, mialgias y eosinofilia involucrado el hombre. De hecho, la inmensa ma­ en un plazo aproximado de un año.
elevada. Sinonimia: Trichinellosis. yoría de las infecciones humanas por triquinosis, En consecuencia, un mismo individuo es, suce­
son producidas por T. spiralis. Figura 36-2. Ejemplar hembra de Trichinel/a spiralis sivamente, hospedero definitivo e intermediario del
- Trichinel/a pseudospiralis, la cual, aunque no penetrando en una vellosidad intestinal. Scanner. (Corte­ parásito. Es hospedero definitivo cuando alberga en
Biología
es frecuentemente observada, afecta más a las aves sia del Dr. K.A.Wright). su intestino las fonnas adultas, y es intermediario
que a los mamíferos y se caracteriza por ser de cuando las larvas se localizan en su musculatura.
La Trichinel/a es un pequeño nematodo blan­ menor tamaño y por no formar quistes en la muscu­ Sin embargo, para completar todo su desarrollo, la
quecino y filiforme, con su extremidad anterior más - Trichinella nativa de las zonas árticas que, Trichinel/a requiere siempre de dos hospederos.
latura del hospedador. 7 distintivamente, presenta una considerable resis­
adelgazada que la posterior, cuya hembra mide 3-4 - Trichinel/a nelsoni del Africa tropical, la cual
mm y el macho es de menor tamaño. Hasta hace tencia a la congelación, tiene bajo grado de infec­ Epidemiología
se encuentra en los grandes carnívoros de la región, tividad para el cerdo doméstico, y en el hombre
algunos años, se conocía como única especie a la presenta un bajo grado de infectividad para los cer­
Triclzinel/a spiralis (Owens, 1835); sin embargo, provoca importantes síntomas digestivos; princi­ La triquinosis es una infección parasitaria que
dos domésticos y ratas de laboratorio, y en el hom­ palmente diarreas prolongadas.
aunque rnorfológicamente similares, el uso de prue­ bre provoca intensas infecciones con un gran núme­ se transmite por camivorismo entre animales do­
bas de ADN y tecnología de PCR, han permitido - Triclzinel/a britovi, se presenta en algunas zonas mésticos (ciclo de transmisión doméstico o
ro de larvas por gramo de músculo; aunque ha sido montañosas de Europa formando parte de un ciclo
distinguir diversas especies de Trichinel/a, entre las fatal en ocasiones, es muy bien tolerada a pesar de sinantrópico) y en algunas regiones del mundo, entre
cuales se distinguen: silvestre de transmisión, en el cual su reservorio animales silvestres (ciclo de transmisión silvestre).
la masividad de la infección. principal es el zorro, además de Jobos y mustélidos. El hombre se infecta, casi exclusivamente, al comer
Los principales hospederos domésticos de T. carne cruda o mal cocida de cerdo, con quistes lar­
spiralis son la rata, el cerdo y el hombre (Figura 36- vales de Trichinella. En raras ocasiones, suele in­
1 ). El hombre adquiere la infección a través de )a fectarse por la ingestión de carnes infectadas de
ingestión de carne de cerdo cruda o insuficiente­ otros animales, como el jabalí, el oso, la foca, la
mente cocida, con larvas de triquina. Los jugos morsa, etcétera.
digestivos digieren la carne y las larvas quedan en
libertad en el intestino, donde rápidamente, ya a las Ciclo doméstico. El cerdo adquiere la infec­
cuarenta y ocho horas, se diferencian en hembras y ción, principalmente, por la ingestión de ratas in­
machos adultos. Copulan en el lumen intestinal y, fectadas, lo que es posible cuando es criado en malas
mientras los machos son eliminados con las depo­ condiciones higiénicas o, simplemente, cuando debe
siciones del hospedero luego de cumplida su fun­ buscar su propia fuente de alimentación en sitios
ción genésica, las hembras grávidas -que son viví­ eriazos o basurales; además, el cerdo se infecta con
paras- se localizan en el interior de la mucosa del carnes de otros animales que encuentra en los cria­
duodeno y del yeyuno (Figura 36-2). Entre el terce­ deros o en los basurales. Las ratas, debido princi­
ro y el quinto dia, comienza la postura de larvas. palmente a sus hábitos de canibalismo, mantienen
Cada hembra coloca alrededor de 1.500. Estas lar­ y propagan la infección en la naturaleza.
vas miden entre 80 y 120 µm, se profundizan en la La viabilidad de las larvas de T. spiralis no es
mucosa intestinal, penetran a través de los capilares afectada por el ahumado o la salazón de las carnes.
linfáticos y venosos y llegan a la circulación gene­ En cambio se destruyen por la congelación a - l 5ºC,
ral, diseminándose por todo el organismo, p_ero durante velnte dias, o a -30ºC, durante veinticuatro
enquistándose sólo en la musculatura esquelé!Ica. horas. Sólo en algunos países latinoamericanos la
Las larvas se localizan en el interior de las fibras infección tiene importancia clinica y ep!demiol_ó­
l musculares, destruyéndose parcialmente; al cabo gica. En los países del cono sur -: Argentina, Cl11le
de unos quince días, quedan rodeadas por una en­ y Uruguay-, en México y en las t� las Bahamas, la
voltura constituida por el sarcolema. Así se origina triquinosis es endémica y evolu wna con. brot_es
el quiste larval, que mide entre 250 a 400 µm y que, epidémicos espoiádico·s. En México;7 estudio sis­

Figura 36-1. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión de la Trichinella spiralis. en consecuencia, no es visible a simple vista, aun- temáticos en autopsias han demostrad_o la existen-
320 PARASITOLOGIA MEDICA TRIQUINOSIS 321

En las ratas la infección se mantiene, como ya aparece involucrado como un hospedero accidental
hemos dicho, por sus hábitos de canibalismo; es y se la ha descrito en zonas geográficas tórridas o
nmmal que la infección de las ratas que habitan en muy frías.
el interior o en los alrededores de los mataderos o En Africa tropical se ha pesquisado la Trichi­
de los basurales, sea varias veces superior al de nel/a nelsoni en los grandes carnívoros. Especial
aquellas que lo hacen en otras áreas de una ciudad. importancia tiene la hiena, la cual disemina la in­
Los perros y los gatos también pueden ser hos­ fección gracias a sus hábitos carroñeros. El hom­
pederos de T. spiralis; encuestas en perros han de­ bre se infecta con T. nelsoni principalmente por
mostrado un cuadro similar al observado en las ingestión de cerdos salvajes. En Kenya se han pro­
ratas: una prevalencia muy superior de la infección ducido epidemias que han afectado a muchos indi­
en aquellos animales examinados en las cercanías viduos, la mayoría con sintomatología benigna.
de los mataderos, en relación con los de otras zonas En el Artico se ha encontrado la Trichine/la
de la ciudad. Los cadáveres de perros y de gatos nativa en lobos, osos, morsas y focas. Es una espe­
infectados y abandonados en los basurales son otra cie adaptada a esos lugares gracias a su resistencia
fuente de infección para las ratas y los cerdos. a la congelación. También se han descrito epide­
La infección de los carnívoros silvestres, de di­ mias en poblaciones humanas que viven en esas
versos roedores, de zorros, etc., no alcanza cifras de latitudes, las cuales se infectan por comer carnes de
importancia, aunque esa puede ser una fuente po­ osos o morsas, y cuyo cuadro clínico se caracteriza
tencial para la infección de las ratas sinantrópicas. por diarreas prolongadas y rebeldes.
En Latinoamérica no se han descrito casos de tri­
Patología

11
quinosis humana de otro origen que el del cerdo
doméstico.
Una situación aparentemente paradoja! se pro­ La presencia de hembras grávidas en el espesor
dujo a raíz de la comunicación de dos brotes epidé­ de la mucosa intestinal, la invasión del torrente
micos de triquinosis ocurridos en Francia e Italia en sanguíneo por las larvas, muchas de las cuales son
1975 y en París en. 1985, cuyo origen fue debido al allí destruidas, su diseminación por todos los órga­

·1·1.
Figura 36�3. Larva de Trichinella spiralis en músculo estriado. (A) Invasión masiva de larvas sin enquistar, en un consumo de carne importada de caballo, el cual, nos, la invasión de las fibras musculares esqueléticas
caso agudo mortal. (B) Larvas enquistadas. (C) Sección histológica de quiste larval. (D) Quistes calcificados. como se sabe, es herbívoro. A raíz del primer brote y la destrucción parcial de estas fibras invadidas,
,;._
epidémico, se comprobó experimentalmente, que desencadena un proceso toxialérgico, responsable
este animal se puede infectar cuando a su forraje se del cuadro clinico de la triquinosis (Lámina 30).
cia del parásito entre 4 y 15%; pero, desde el punto 0,33%. En Chile se ha encontrado el 0,2% en 1975. adiciona carne infectada con quistes de T. spiralis. Las larvas L 1 que alcanzan las fibras musculares
de vista clínico, la mayoría de los casos se presenta Sin embargo, la investigación de los porcinos con En la naturaleza, es posible incriminar al caballo estriadas, penetran activamente a su interior, ere-.

¡r\_
con sintomatología atenuada o son subclínicos, y resultados negativos no indica, necesariamente, que como otro hospedero de la triquinosis, pero como cen, maduran e inducen un sorprendente fenómenó
algo similar ocurre en Las Bahamas. En Uruguay la no exista triquinosis en determinadas regiones; por un hecho excepcional. de adaptación con su célula huésped. Desde lúego,
triquinosis es endémica y estudios necrópsicos han el contrario, cualquier resultado positivo, aunque Los casos más graves de triquinosis se observan, las larvas de T. spiralis son los parásitos intracelu­
demostrado en el 3%, pero también la mayoría de sea en un número bajo de aniq¡ales, implica siem­ con mayor frecuencia, en las zonas rurales. lares más grandes y hasta hace poco, se les conside­

¡.
las infecciones son subclínicas. En Argentina ocu­ pre una situación de endemia o de enzootia. En las ciudades, el riesgo de infección y su in­ raba que, al igual a lo que ocurre con los quistes de
rre algo similar, pero no es raro que se denuncien tensidad disminuyen debido al control médico-vete­ Toxop/asma, permanecían "donnidas" o quiescentes
brotes epidémicos esporádicos. En Chile la situa­ rinario en los mataderos, al alto grado de industria­ por años, en espera de poder continuar su ciclo
ción es parecida: se presenta como una endemia lización de la carne y al hecho de que en la fabrica­ evolutivo. Sin embargo, mediante estudios experi­
con aumento de los casos en la estación fría, época ción de cecinas se produce una mezcla de carnes mentales in vivo, se ha determinado que el parásito
en que se incrementa el consumo de carnes de cerdo sanas y contaminadas, lo que trae como consecuen­ induce una serie de modificaciones dentro de la
y son frecuentes los brotes epidémicos. En estu­ cia una dilución del material infectante. Las condi­ célula muscular y llega a producir una "célula no­
dios necrópsicos, se ha encontrado T. spiralis en­ ciones son, en cambio, diametralmente opuestas en driza", unidad morfofisiológicamente independien­
tre el 13 (1944) y el 2% (1969). En el resto de el campo. Allí, con frecuencia, la matanza de un te y altamente especializada. Cada célula nodriza
Latinoamérica, aun cuando se han efectuado estu­ cerdo sirve para la alimentación de la familia y, por desarrolla un fino plexo de vénulas periquísticas
dios sistemáticos, la triquinosis no se ha descrito o ello, la infección adquiere caracteres de pequeñas que facilita el intercambio metabólico con el hospe­
suelen presentarse algunos casos autóctonos espo­ epidemias que afectan a todo un grupo familiar y a dero y, aparentemente, la larva no digiere el cito­
rádicos. Aparentemente, en Argentina y Chile se sus relaciones. En ocasiones, el envío de carnes o plasma de la célula que le da albergue. En el inte­
observa el mayor número de triquinosis clínica y cecinas de cerdo, desde el campo a las ciudades, rior de estas células el parásito es móvil: realiza
subclínica. Esta circunstancia puede deberse al origina brotes epidémicos. lentos movimientos anteroposteriores y su extremi­
mayor estudio sistemático de la infección empren­ dad anterior oscila constantemente como exploran­
dido en estos países desde hace muchos años. Ciclo silvestre. La infección ocurre entre carní­ do el microambiente que lo rodea.
En algunas regiones latinoamericana.s, ,.en las Figura 36-4._ Quiste d_e.]richine(la spit:gl(s ..con, .nueve voros que se alimentan de presas vivas o de cad�ve0 . Lps gus�nos !!dtlltos que invaden el intestino
cuales la triquinosis es endémica, la infección del • larvas en su interio'r, en musculatura de· cerdo, (Cortesía res de animales, cuyas carnes están infectadas con producen un proceso inflamatorio de intensidad
cerdo es más bien baja y varía entre el O, 14 y el del Dr. Carlos Pérez B., Chile). larvas de Trichinella. En este ciclo, el hombre variable. Esta enteritis superficial es la productora
322 PARASITOLOGIA MEDICA TRIQUINOSIS
323
de los síntomas gastrointestinales de la triquinosis. ción del parásito én el intestino, al de la postura de tiva, es muy característica la diarrea profusa y re­ como una pápula rojiza entre las doce y veinticuatro·
Los fenómenos toxialérgicos son los causantes del las larvas y al de la invasión de éstas a todo el or­ belde. horas. La reacción precoz se hace por lo común
síndrome infeccioso y de los signos oculopalpebrales. ganismo, por vía sanguínea; y un período de es­ Con alguna frecuencia, suelen presentarse ma­ positiva entre los diez y treinta días de la infección'.
Las mialgias se explican por los fenómenos de tado, producido por el proceso de enquistamiento nifestaciones cutáneas, tales como rash escarlatini­ En la práctica, es de mayor valor diagnóstico la re­
miositis producidos alrededor de los quistes larva­ larval. forme, dermografismo, prurito, etc., que aparecen y acción precoz positiva.
les. Cuando las larvas llegan a las fibras muscula­ regresan rápidamente. Para el diagnóstico serológico, se emplean las
res, se produce un fenómeno de necrosis y, al cabo . Período de incubación. La sintomatología se Complicaciones importantes se producen cuan­ reacciones de precipitinas, de floculación a la ben­
de unos quince días, el sarcolema forma la pared presenta de tres a treinta días después de haberse do se comprometen el sistema nervioso central y el tonita, de inmunofluorescencia y ELISA. Todas ellas
quística. Habitualmente, cada quiste contiene una contraído la infección; lo habitual es su aparición miocardio (Véase el Capítulo 47: Parasitosis del aparecen positivas entre la segunda y cuarta semana
larva enrollada en su interior, pero no son raros los entre el octavo y decimoquinto día posteriores al día Corazón). La miocarditis y la encefalitis son cua­ postinfección, y la sensibilidad y especificidad pue­
casos con dos, tres o más larvas (Figura 36-4). La en que se consumió la comida infectante. Existe un dros infrecuentes, que se explican por un grave den variar de acuerdo con la calidad de los antíge­
inflamación periquística es producida por linfo­ grupo de infectados con pequeñas molestias ("gri­ proceso inmune y no por la acción directa de la T. nos utilizados (véase El diagnóstico de laboratorio
citos, monocitos y eosinófilos, y evoluciona hacia pe"), compatibles con el trabajo diario; otro es asin­ spiralis sobre esos órganos, ya que el parásito no se de las parasitosis).
la fibrosis. Al cabo de unos seis meses comienza el tomático, como se ha demostrado mediante las au­ enquista ni en el miocardio ni en el sistema nervio­
depósito de calcio en el quiste, fenómeno que se topsias. so. Biopsia muscular. Debería ser teóricamente el
inicia por sus polos y se completa en un lapso de En síntesis, en el período de estado la triquino­ más importante de los exámenes de laboratorio,
alrededor de un año. Las larvas pueden pennanecer Período de invasión. Dos tercios de los enfer­ sis, los síntomas infecciosos, los oculopalpebrales y puesto que demuestra el agente etiológico, pero es
vivas durante años en el interior de los quistes, siem­ mos presentan un síndrome infeccioso de intensi­ las mialgias son los más llamativos desde el punto poco práctico e invasivo. Por ello, se lo considera
pre que no estén totalmente calcificados. En el caso dad variable, caracterizado por fiebre y sensación de vista clínico. Si bien es cierto que los síntomas como un examen de excepción. Para su ejecución,
de T. pseudospiralis, un signo distintivo es que no febril, malestar general, cefalea y astenia. gastrointestinales adquieren jerarquía en este perío­ se obtiene una pequeña muestra de músculo estria­
forma quistes en la musculatura del hospedero. Le siguen, en frecuencia, los síntomas oculo­ do, siguen ocupando un lugar secundario en cuanto do; generalmente, se utiliza el deltoides para este
Comúnmente, el fenómeno toxialérgico dura palpebrales, el más importante de los cuales es el a su frecuencia. examen.
alrededor de un mes y luego se restablece el equili­ edema palpebral, que se caracteriza por ser bilate­
brio entre el hospedero y el parásito, declinando en ral, simétrico, indoloro, de aparición brusca y de Diagnóstico Tratamiento
forma paulatina la sintomatología. En aquellos duración variable entre varios días y algunas sema­
pacientes que continúan con astenia y mialgias, nas. En ocasiones, el edema compromete toda la Cuando la triquinosis se presenta en forma de Tratamiento específico. Si bien aún no dispo­
después de este período, es dificil decidir si estos cara adoptando un aspecto pseudonefrítico. Un sig­ brotes epidémicos, el diagnóstico habitualmente es nemos de medicamentos I 00% eficaces, el uso de
síntomas vagos corresponden realmente a la triqui­ no ocular de alto interés por su constancia es la fácil. En cambio, los casos esporádicos suelen ofre­ derivados benzimidazólicos (albendazol, mebenda­
nosis o son producto de la aprehensión frente a la inyección conjuntiva! del ángulo externo del ojo. cer dificultades diagnósticas, sobre todo si los sín­ zol) han abie1to perspectivas halagadoras en el tra­
enfermedad. Los casos graves de triquinosis pueden Los enfermos tienen sensación de cuerpo extraño o tomas no son muy intensos. El diagnóstico se fun­ tamiento específico de la triquinosis, tanto en la
llevar a la muerte por un compromiso cardiaco o del de arenilla en los ojos. Otras veces hay dolor al damenta en la anainnesis, en el cuadro clínico y en fase intestinal (acción contra los helmintos adultos
SNC; los casos fatales suelen corresponder a pa­ movimiento <je los globos oculares, debido al com­ los datos de laboratorio. y larvas en desarrollo) como en el período de estado,
cientes con una enfennedad crónica (hipertensión, promiso de los músculos externos de este órgano. contra las larvas ya enquistadas en la musculatura
arterioesclerosis) a la cual se agregó la parasitosis. Los síntomas gastrointestinales no son tan fre­ Hemograma. Evidencia una leucocitosis de esquelética. El albendazol se administra en dosis de
La miocarditis es una complicación que se pre­ cuentes; según nuestra experiencia, durante este magnitud variable y, lo que es aún más constante, 400 mg y el mebendazol en dosis de 600 - 1200 mg,
sentaría entre la cuarta y séptima semana de la período sólo un tercio de los pacientes presenta una acentuada eosinofilia que frecuentemente llega durante 3 a 7 días. Por la potencial acción larvicida
infección, la cual no estaría necesariamente relacio­ dolores abdominales· difusos y signos de gastro­ al 40, 60 y 70% la relativa y a 1.500 o más eosinó­ de estos medicamentos, debieran ser usados conjun­
nada con la severidad de la infección. Pareciera que enteritis (diarrea o constipación). filos la absoluta (véase el Capítulo 62: Eosinofilia tamente con dosis elevadas de corticosteroides por
los casos de compromiso miocárdico no serían ra­ En resumen, los síntomas y signos de inicio de y parasitosis). La aparición de eosinófilos inmadu­ el peligro de la brusca liberación _masiva de antíge­
ros, pero se caracterizan por su evolución benigna la enfermedad más destacados son la fiebre, el ede­ ros (baciliformes), reviste especial valor diagnósti­ nos provenientes de las larvas enquistadas.
y curación sin secuelas. La patogenia de la miocar­ ma palpebral y la inyección conjuntiva!. co en aquellos casos con eosinofilia discreta y aun Tratamiento sintomático. Indicado para ali­
ditis no ha sido aclarada, puesto que las larvas de nonnal, en los cuales se evidencia la existencia de viar las nialgias y las manifestaciones de sensibiliza­
Trichi11ella, si bien invaden el miocardio, no se Período de estado. En este periodo se acentúa o algunos elementos inmaduros en el frotis. La con­ ción toxialérgica. Se pueden administrar analgési­
enquistan en ese sitio y pareciera qué las alteracio­ aparece el sÍlldrome infeccioso, ya que el 95% de los junción de un cuadro clínico severo y de aneosi­ cos comunes, antinflamatorios no esteroidales o
nes se deberían a un proc�so inmune. En autopsias, enfennos presenta fiebre y la sintomatología propia nofilia, es un índice de mal pronóstico. Tanto los corticosteroides. Estos últimos administrados en
se han demostrado lesiones difusas de inflamación, de este síndrome. Además, aparecen mialgias, de glóbulos rojos como las plaquetas son nonnales. dosis elevadas, con decenso progresivo en pocos
edema, fibrosis intersticial y necrosis de fibras car­ intensidad variable en el 80%, desencadenadas es­ días, tienen una acción muy eficiente contra las
díacas. _pecialmente con los movimientos (respiración, mas­ Reacciones inmunobiológicas. La intradermo­ mialgias y el síndrome infeccioso (Véase el Capítu­
ticación, deglución, deambulación, etc.); en ocasio­ rreacción de Bachman se p ractica mediante la in­ lo 66: Tratamiento·de las parasitosis y Tablas tera­
Síntomatología nes, suele haber trismus. yección intraepidénnica de O, I mL de antígeno de péuticas).
Los síntomas oculopalpebrales son más frecuen­ larvas de Trichinella. Se distingue una reacción
En el cuadro clínico de la triquinosis se distin­ tes (67%) que al inicio de la enfermedad y, ahora, la precoz y una tardía. La primera, cuya lectura se Prevención
gue un período de i11c11bación, que abarca desde el mitad de los enfermos tiene síntomas gastro­ practica a los treinta minutos, se caracteriza por una
momento de la ingestión de la carne infectada hasta intesilnáles (dolor abdominal; estadci·'riaitseoso y pápula rodeada de un halo eritematoso, cuyo diáme­ Las medidas profilácticas están enea.minada� a
la aparición de los primeros signos; un período de vómitos, constipación y/o diarrea). En· lós'casos de tro debe ser, como mínimo; el doble del tamaño de evitar la infección, tanto del cerdo como del hom­
invasión, que corresponde al periodo de reproduc- infección por las cepas del Artico, Trichinella na- la pápula inicial. La reacción tardía se presenta bre:
_1
324� PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 37

Prevención de la infección del cerdo. Se con­


sigue con la crianza higiénica, en porquerizas bien
BIBLIOGRAFIA ANGIOSTRONGILOSIS ABDOMINAL
construidas, limpias y alejadas de los basurales y de Andrews JR, Bamdi C, Pozio E y cols. Identification of
las ratas. Esto constituye la medida profiláctica Trichine//a pseudospira/is from a human case usign PEDRO MORERA
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a) Educación sanitaria dirigida a inculcar el would be virus. Parasitol Today l 990; 6: l 93-6. Definición. La angiostrongilosis abdominal, está la cloaca, por la cual emergen las espículas que
hábito de ingerir cecinas y carne de cerdo adecua­ Dworkin MS, Gamble HR, Zarlenga DS, Tennicam PO. producida por el nematodo Angiostrongylus cos­ son relativamente cortas. Las hembras miden un
damente cocidas. Outbreak of trichinellosis associated with eating taricensis Morera y Céspedes, 1971 (Moreras­ promedio de 32 mm y cerca de la cauda de forma
b) Centralización de la matanza de cerdos en cougar jerkly. J Jnfect Dis 1996; 174:663-6. trongylt1s costaricensis Chabaud, 1972), se caracte­ cónica, están el ano y el poro genital.
establecimientos sujetos a la inspección de las car­ Gould ES. Trichinosis in man and animals. Springfield, riza por una reacción inflamatoria granulomatosa Los hospederos definitivos naturales de A. cos­
nes por parte de personal técnico idóneo y respon­ lllinois: Charles C Thomas Publisher, l 970. con fuerte infiltración eosinofilica y en ocasiones, taricensis lo constituyen varias especies de roedores
sable. Con este objeto, el médico veterinario debe Pozio E, La Rosa G, Serrano F y cols. Environmental and necrosis de la pared intestinal, especialmente de la (Figura 37-1), en donde los vermes adultos se ubi­
examinar cortes de músculo de los animales sacri­ human influence on the ecology ofTrichine//a spiralis región ileocecoapendicular. Las localizaciones can en el interior de las ramas de la arteria me­
ficados (de preferencia cortes de los pilares del dia­ and Tricltine//a brilovi in Western Europe. Parasitology ectópicas en el hígado y en las arterias espermáticas sentérica de la región ileocecal. La copulación se
fragma y de la base de la lengua). Estos se observan 1996; 113:527-33. en los niños, causan lesiones en estos órganos. realiza en el interior de los vasos sanguíneos y poco
con el triqt1inoscopio, que es un microscopio de Stewart GL. Biological and immunological characteristics después la hembra oviposita; los huevos son arras­
pequeño aumento, o con elfototriqt1i11oscopio, ins­ of Trichine/la pseudospiralis. Parasitol Today 1989; Biología trados por la sangre hacia la pared intestinal, en
trumento que proyecta sobre una pantalla las prepa­ 5:344-9. donde quedan atrapados cuando el calibre del vaso
raciones que se están examinando, lo que permite Taratuto AL, Venturiello SM. Trichinosis. Brain Pathol El Angiostrongy/¡¡s costaricensis es un nema­ se hace muy pequeño. Aquí se inicia la embrionación
una revisión más rápida. 1997; 7:663-72. todo cuya boca es una pequeña abertura provista de y al cabo de cuatro días se forma la larva de primer
Otras medidas profilácticas, como el tratamiento Viallet J, Mac Lean JD, Goresky GA, Staudt M, Roucher tres labios. Los machos miden un promedio de 20 estadio (LI), la cual se desplaza hacia el lumen
de las carnes por el frío durante un tiempo prolon­ G, Law C. Artic trichinosis presenting as prolonged mm y en la extremidad caudal tienen una bolsa intestinal y sale al exterior con la materia fecal del
gado, la congelación brusca a muy bajas temperatu­ diarrhea. Gastroenterology 1986; 91:938-46. copulatriz medianamente desarrollada; en el centro roedor.
ras o el uso de sustancias radioactivas (Co"), si Wakelim D, Goyal PK. Trichille//a isolates: parasite
bien son eficaces, requieren un gran despliegue de variability and host responses. lnt J Parasitol l 996;
recursos materiales y tecnológicos que están muy 26:471-81.
alejados de la realidad socioeconómica de los países Wright KA. Tricltine/la spiralis: An intracelular parasite
en desarrollo. in the intes,tinal phase. J Parasitol 1979; 65:441- 5.
Arterias
mesentéricas

------------------ Pared Intestinal------------------

ROEDORES
y eventualmente
otros hospederos definitivos (hombre)
Ingestión de vegetales Heces
contaminados con In baba
o por ingestión del moluséo JBABOSA
Tejidos
fibromusculares

Figura 37-1. Ciclo evolutivo de Angiostrongylus costaricencis. En el hospedero definitivo, las hembras colocan
huevos de los cuales emergen larvas L I que son eliminadas al exterior por las heces. La babosa, hospedero
intermediario, se infecta al ingerir Ll y en sus tejidos S!!.d�sa(!OJlan larvas L2 y L3, esta última es la forma infectante
para la rata. Luego de dos mudas en lo� vasos linfáticos intestinales, se transforman en L5, l�s cuales se desplazan
a los vasos mesentéricos de la región ileocecal donde se desarrollan como vermes adultos.
326� PARASlTOlOG[:,, MED[CA ANGlOSTRONGllOSlS ABDOMINAL 327

También se han encontrado con infección natural siderar que no son muy severas, se practica sola­
en Costa Rica el perro y el coatí mundi (Nasua mente una apendicectomía; el estudio histológico de
narir:a) y marmosetas (Saguinus mystaxs) en la la pieza generalmente muestra las lesiones caracte­
Amazonía peruana, cerca de !quitos, lo que sugiere rísticas de la angiostrongilosis abdominal (Figura
no solamente una amplia distribución geográfica 37-5).
del parásito, sino cierta inespecificidad de hospede­ Los exámenes realizados en cientos de casos
ro, lo que facilita su ubicuidad. humanos y los estudios de patología experimental,
El hospedero intermediario más importante lo demuestran que existen dos mecanismos patogénicos
constituyen varias especies de la Familia Veroni­ bien definidos: primero, los parásitos adultos copulan
cellidae, babosas de distribución cosmopolita. En dentro de las arterias y los huevos son arrastrados
Costa Rica se han encontrado dos especies de esta por la corriente sanguínea hacia la pared intestinal
n Familia con infección natural, una de las cuales, en donde inician la embrionación; al mismo tiem­
11 Sarasinula plebeia, se considera el hospedero inter­ po, como los vennes están vivos, además de repro­
mediario más importante en toda el área centro­ ducirse, comen, excretan y secretan. Estos produc­
americana (Figura 37-2C). También se ha descrito tos de excreción/secreción, entre los que hay proteí­
una especie en Brasil y otra en Ecuador con infec­ nas extrañas al hospedero y, por lo tanto, se .com­
ción natural. En un estudio de 6.025 babosas reali­ portan como antígenos, son también arrastrados junto
zado en Costa Rica, se encontró un promedio de con los huevos a la pared intestinal; estos dos fac­
infección de 50% para todo el país, con algunas tores son los responsables del fenómeno inflamato­
regiones en donde el 75,6% de los moluscos estaban rio. El segundo mecanismo patogénico también lo
infectados. En este mismo estudio se pesquisaron causan los nematodos adultos: al vivir dentro de las
más de 16.000 larvas infectantes en una sola babo­ arterias (Figura 37-6), causan pequeñas lesiones trau­
sa. Además, otros moluscos acuáticos y terrestres, máticas e inmunológicas (por absorción de los pro­
se han encontrado con infección natural. ductos de excreción/secreción) del endotelio, lo que
G,, En estas condiciones consideramos que las opor­
tunidades de infección para el hombre, son muy
produce turbulencias de la corriente sanguínea que
eventualmente hace que se forme un coágulo que
altas. Debido a que las L3 pue¡len salir con la secre­ luego se organiza en un trombo; cuando éstos obs­
Figura 37-2. A11giostro11gi/osis. (A) Larva infectante de A11giostro11gy/11s costaricencis (3er estadio). (B) Sigmodon ción mucosa del molusco, es probable que la mayor truyen la luz de una arteria, se va a observar el
hispidus, huésped natural más importante, en Costa Rica de A, coslaricencis. (C) Vagi1111/us (Sarasinula) p/ebeius, parte de las infecciones humanas se produzcan al fenómeno necrótico de la pared intestinal.
huésped intermediario de A. costaricencis. (D) Arteria de la región cecal de la rata, abierta para mostrar A. costaricencis. ingerir vegetales contaminados con la baba de las El estudio histopatológico muestra que la infla­
babosas. La costumbre de los niños pequeños de mación es generalmente de tipo granulomatoso, con
llevarse objetos a la boca que podrían estar contami­ fuerte infiltración eosinofilica, especialmente en la
nados, explica la más alta prevalencia de la enfer­ mucosa y la submucosa; la muscular y fa serosa son
Los hospederos intennediarios son las babosas, del Caribe. Solamente en Chile, Bolivia, Paraguay medad en este grupo de población. menos afectadas. En los vasos arteriales pequeños
las cuales se infectan mediante la ingestión de las y Uruguay no se ha encontrado esta parasitosis. El se pueden observar los huevos, los embriones y las
heces de la rata que contienen las LI. Una vez en el primer caso fuera de nuestro continente se demostró Patología larvas recién formadas. Cuando los huevos son
tubo digestivo del molusco, las larvas se mueven en Africa (Zaire), a finales de la década pasada. infértiles generalmente es muy dificil identificar­
hacia sus tejidos fibromusculares, cerca de la super­ La similitud de las condiciones ecológicas en los En los seres humanos, al igual que en los roedo­ los. Estas estructuras, así como los productos de
ficie. En 18 días y luego de dos mudas, se transfor­ países vecinos a Costa Rica y en otros países de res, los parásitos adultos se localizan dentro de las excreción/secreción (antígenos), que generalmente
man en la larva infectante de tercer estado (L3). América Latina, sugiere que el factor más impor­ arterias mesentéricas, especialmente las ramas que están rodeadas de áreas microscópicas de necrosis,
Los roedores se infectan mediante la ingestión tante para que se encuentre la enfermedad, es su irrigan la región ileocecal, en donde, la mayor parte se pueden identificar mediante técnicas inmuno­
de los moluscos infectados. La L3 penetra la pared conocimiento entre el personal médico. De hecho, de las veces, también se observan las lesiones; sin químicas, lo que facilita al patólogo el diagnóstico
intestinal e inicialmente se ubica en los vasos linfá­ cada vez se hace más evidente que la prevalencia es embargo, ocasionalmente se pequisan lesiones en el específico. Al contrario, las grandes áreas de ne­
ticos en donde se realizan las dos mudas finales; los más alta en donde se ha mejorado el conocimiento ángulo hepático y en el colon descendente, en los crosis que pueden causar perforación, son producto
juveniles (L5) se trasladan a los vasos arteriales e sobre la parasitosis y sobre los métodos de diagnós­ ganglios linfáticos regionales, en el hígado y en las de la trombosis y la isquemia. Los ganglios linfáti­
inician su desarrollo hacia la fonna adulta. El pe­ tico de laboratorio. En 1993 se diagnosticaron en arterias espermáticas de niños pequeños. cos regionales presentan. hiperplasia reticulo­
riodo prepatente es de 24 días. Costa Rica (población: 3 millones}, 650 casos, lo El estudio macroscópico de las piezas quirúrgi­ endotelial y eosinofilia, y en ellos es posible encon­
que da una tasa de infección, probablemente toda­ cas (Figura 37-4) muestra un engrosamiento y endu­ trar huevos y embriones.
Epidemiología vía subestimada, de 19 ,5 casos por 100.000 habi­ recimiento de la pared intestinal, con áreas de as­ Las lesiones hepáticas, causadas por la localiza­
tantes por año. En este país, la distribución geográ­ pecto amarillento en la serosa y en algunas partes ción ectópica de algunos parásitos en las venas
El primer caso no costarricense de angíostron­ fica es universal, desde el nivel del mar, hasta más del mesenterio. El lumen intestinal se encuentra mesentéricas, son muy similares a las que se obser­
gilosis abdominal se encontró en Honduras. En la de 2.500 m de altura. reducido por el aumento de grosor de la pared, van en el síndrome de larva migrante visceral causa­
década de los 70 se comunicaron varios casos en A pesar de que la rata algodonera Sigmodon causando algunas veces una obstrucción parcial. do por Toxocara ca11is. Sin embargo, el hallazgo de
Venezuela, México y Brasil. En la actualidad, la hispidus se considera el hospedero definitivo más ... Cuando hay áreas de necrosis, pueden causar perfo­ huevos, embriones y a veces vermes adulto.s en el
enfermedad se encuentra desde los Estados Unidos importante, en Costa Rica se han descrito otras ración y peritonitis. En muchos casos, a pesar de parénquima hepático, permite establecer el diag­
hasta el norte de Argentina, así como en varías islas once especies de roedores naturalmente infectados. que el cirujano observa lesiones en el ciego, al con- nóstico correcto.
PARASITOLOGIA MEOJC,4 ANGJOSTRONGI LOSJS ABDOMINAL 329

febrícula, dolor y eosinofilia por muchas semanas.


También se puede presentar anorexia, vómito y cons­
tipación. En algunos casos, un hallazgo muy impor­
tante para establecer la sospecha clínica es la presen­
cia de una masa que se puede palpar en el cuadrante
inferior derecho y que debe ser diferenciada de un
tumor de otra naturaleza. En ocasiones se observa un
sangrado profuso que puede ser confundido con un
divertículo de Meckel.
Auncjue en algunos pacientes no se observan
cambios hematológicos, la presencia de leucocitosis
y eosinofilia es muy importante para sospechar la
enfermedad. Generalmente el recuento de glóbu­
los blancos varía de 15.000 a 40.000/mm'y la eosi­
nofilia de 20 a 50%. En raras ocasiones se presen­
tan casos con leucocitosis de l 70.000/mm3 y 90%
de eosinófilos.
El e.studio radiológico con medio de contraste
es muy importante; las lesiones generalmente se
observan en el íleon terminal, ciego, apéndice y
colon ascendente. Mediante este método es posi­
ble observar defectos de llenado e irritabilidad del
ciego y del colon; el lumen puede estar reducido
irregulannente por el engrosamiento de la pared in­
t e s t i n a1.
En los casos de localización hepática, el paciente
presenta dolor del cuadrante superior derecho. Hay
hepatomegalia y el hígado es liso a la palpación. En
una laparoscopia es posible ver pequeñas manchas
Figura 37-4. Angiostrongilosis. Pieza quirúrgica de la amarillentas en la superficie hepática. En la mayoría
región ileocecal. Engrosamiento de las paredes del íleon
de los pacientes, las lesiones del hígado son conco­
tenninal, ciego y colon ascendente, debido al proceso mitantes con angiostrongilosis intestinal.
inflamatorio. En Costa Rica se han encontrado varios casos 'de
necrosis del parénquima testicular causada por este
parásito. Los hallazgos más importantes son dolor
tosis. Es probable que el hábito de llervarse a la boca agudo acompañado por enrojecimiento de uno de
vegetales u objetos que podrían estar contamina­ los testículos. La eosinofilia y la leucocitosis gene­
dos con la secreción de las babosas, sea la causa ralmente son altas en estos casos. Todos los pacien­
de este fenómeno y no una mayor resistencia en los tes con estas lesiones fueron niños y el diagnóstico
adultos. clínico fue de torsión del testículo; sólo después del
En un estudio de 116 pacientes de un hospital estudio histopatológico se estableció el diagnóstico
pediátrico de Costa Rica, se encontró que el 53% correcto.
eran escolares, 3 7% preescolares y I 0% infantes;
también se observó que los hombres mostraron un Diagnóstico
mayor índice de infección (64%) que las mujeres
(36%); esta diferencia podría deberse a los distintos En las ratas infectadas, las larvas de primer
Figura 31-3.A11giostro11gi/osis abdo111i11a/. (A) Severo engrosamiento de la pared intestinal y ganglio linfático en la base
del mesenterio. (B) Vaso mesentérico con hiperplasia de la íntima frente a un adulto de Angiostrongylus. (C) y (D)
hábitos de juego de unos y otros. estadio se pueden identificar fácilmente en las he­
Fragmentos de helminto rodeado por trombos. (E) Peritonitis crónica con vasos de neoformación. (F) y (G) Huevos de
Como en la mayor parte de los pacientes el pa­ ces. Sin embargo, esto no ·sucede en los seres huma­
A11giostro11gy/11s en la submucosa en distintas etapas de evolución; el de G va formando una larva. rásito se localiza en las ramas ileocecales de la nos por lo que se ha recurrido a los métodos inmu­
arteria mesentérica, igual que en el hospedero na­ nológicos para el diagnóstico de esta parasitosis.
tural, los pacientes presentan dolor, generalmente A pesar de que en unos pocos casos se practicó la
Todas las lesiones testiculares observadas se Sintomatología localizado en la fosa ilíaca y/o flanco derecho. La técnica de inmunodifusión de Ouchterlony con bue­
deben a la obstrucción de las arterias del cordón palpación de esta zona es dolorosa. El tacto rectal es nos resultados, en Costa Rica se ha desarrollado un
espermático por los parásitos adultos; siempre se A pesar .de que la angiostrongilosis abdominal también doloroso en cerca de la mitad de los casos. método de aglutinación de, pa_rt_ículas de látex que
observa necrosis del parénquima testicular y gran­ se observa en personas de cualquier edad, los niños Casi siempre hay fiebre, raramente acompañada de tiene una alta sensibilidad y especificidad; la venta­
des áreas de hemorragia. son los más comúnmente afectados por esta parasi- escalofríos. En los casos crónicos ·puede persistir ja de este último método es que es barato y de fácil
330·· PARASITOLOGIA MEDICA ANGIOSTRONGILOSIS ABDOMINAL 331

científica que pruebe que la mejoría· se debió al tra­ BIBLIOGRAFIA MoreraP, Céspedes R.Angiostrongilosis abdominal.Acta
tamiento con estas drogas. De hecho, estudios expe­ Med Costarríc 1971; 14: 159-73.
rimentales in vivo e in vitro demuestran que los pa­ Arroyo R, Rodríguez F, Berrocal A. Angiostrongilosis Morera P. Life history redescríption of A11gioitrongy/us
rásitos no se mueren con estas drogas, sino que abdominal en Canis familaris.Parasitología al Día 1988; costarricensis Morera and Céspedes, 1971. Am J
se excitan, migran a vasos más pequeños del intes­ 12: 181-5. Trop Med Hyg 1982; 31: 67-70.
tino delgado y producen necrosis isquémica. que Baird JK, Neafle RC, Lanoie L, Connor DH. Abdominal Morera P. Angiostrongiliasis abdominal: Transmisión y
eventualmente causa la muerte de los animales. angiostrongylosis in anAfrican man: Case study. Am observaciones sobre su posible control. OPS/O MS
· Aunque no se pueden traspalar estos resultados al J Trop Med Hyg 1987; 37: 353-6. serie de copublicaciones Nº 1; 230-35, 1985.
ser humano, la agudización de los síntomas y la Céspedes R, Salas J, Mekbel S, Troper L, Mullner F, Morera P, Bontempo l. Acción de algunos antihelmínti­
evolución hacia un cuadro de abdomen agudo en Morera P. Granulomas entéricos y linfáticos con in­ cos sobre Angiostrongy/us costarricensis. Rev Med
pacientes que recibieron tratamiento con estas dro­ tensa eosinofilia tisular producida porun estrongilideo Hosp Nac Niños (Costa Rica) 1985; 20: 165-74.
gas, pemiite inferir que lo mismo podría suceder en (Strongylata). Acta Med Costarríc 1967; 10: 235-55. Robles G, Loría R, RoblesA, Valle S, Cordero C. Granu­
el hombre. Por lo tanto, la quimioterapia no se reco­ ChabaudA. Stefankostrongy/11s dubosti n. sp. parasite du loma eosinofilico parasitario intestinal. Rev Med Hosp
mienda en espera de más estudios para encontrar potamogales et essai de classitication des Nematodes · Nac Niños (Costa Rica) 1968; 3: 67-80.
Figura 37-5. Angiostrongilosis. Nódulo linfático de la una droga que sea realmente eficaz y no cause com­ Angiostrongylinae.AnnParasit Hum Comp 1972;47: Rulz·PJ, Morera P. Sperrnatic artery obstruction caused
región cecal. En el centro se observan dos huevos rodea­ plicaciones. 735-44.
dos de células epiteloides. La mayor parte de las células by Angioslrongylus costarricensis Morera and Cés­
Girard De Kaminsky R, Caballero R, Andrews KL. Pre­ pedes 1971.AmJTropMedHyg 1983;32: 1458-9.
que rodean esta región son eosinófilos. Prevención sencia de Angioslrongylus costarice11sis en Hondu­ Sauerbrey M. A precipitin test for the diagnosis of human
ras y sus relaciones agroecológicas y humanas. abdominal angiostrongyliasis. Am J Trop Med Hyg
realización. Durante los últimos 18 años se han efec­ La angiostrongilosis abdominal no es una de las Parasitol al Día 1995; 19: 81-90. 1977; 26: 1156-8.
tuado más de 18.000 pruebas con este método, en llamadas "patologías de la pobreza", en las cuales Loria'.Cortes R, Lobo-Sanahuja JF. Clinical abdominal Sierra E, Morera P.Angiostrongilosis abdominal. Primer
pacientes con un diagnóstico presuntivo de las malas condiciones sanitarias del entorno donde angiostrongylosis.A study of 116 children with intes­ caso humano encontrado en Honduras (Hospital Evan­
angiostrongilosis abdominal. En más del 97% de vive el paciente son muy importantes. Esta parasito­ tinal eosinophilic ·granuloma caused by Angiostron­ gélico de Siguatepeque). Acta Med Costarricense
estos casos no se han observado reacciones cruzadas sis la observamos en personas de cualquier condi­ gy/11s costaricensis. Am J Trop Med Hyg 1980; 29: 1972; 15: 95-9.
o resultados falsos, negativos o positivos. ción económica, porque lo que se necesita es la 538-44. Sly DL,Toft ID, Gardiner GH, London WT. Spontaneous
existencia de babosas infectadas que contaminen los Monge E, Arroyo R, Solano E. A new definitive host of occurrimce of Angiostrongy/us costaricensis in
Tratamiento alimentos que el hombre ingiere crudos o los objetos Angiostrongylus coslarricensis Morera and Céspe­ marrnosets (Saguinus mystax). LabAnimal Sci 1982;
que los niños se llevan a la boca; ahora bien, estos des 1971. Am J Parasitol 1978; 64: 34. 32: 286-8.
En los casos agudos, la cirugía es el tratamiento moluscos se pueden encontrar en los jardines de Morera P. Granulomas entéricos y linfáticos con intensa Tesh R, Ackerrnan L, Dietz W, Williams J. Angiostron­
de elección. Sin embargo, conforme se ha incre­ mansiones de barrios residenciales, alrededor de eosinotilia tisular producidos p¿r un Strongilideo gy/us costorricensis in Panamá. Prevalence and pa­
mentado el conocimiento de esta parasitosis, se viviendas pobres o en los campos de sembradío en (Strongylata Railliet y Henry, 1903) II Aspecto thological findings in wild rodents infected with the
identifican muchos casos no quirúrgicos, por lo que las áreas rurales. En otras palabras, la medida de parasitológico. (Nota previa).Acta Med Costarricense, parasite. Am J Trop Med Hyg 1973; 22: 348-56.. ·
se ha planteado la necesidad de un tratamiento prevención· mas importante es el control de la pobla­ 1967; 10: 257-63. Uberlaker JE, Hall NM. First report of Angiostrongy/us
médico. Se ha reportado una remisión de los sínto­ ción de estos moluscos, lo cual es una tarea dificil. MoreraP. lnvestigación del huésped definitivo de Angios­ costaricensis Moreraand Céspedes 1971 in the United
mas después del uso de dietilcarbamazina, tiaben­ En América Central, por ejemplo, en donde los lrongy/us cos/arricensis Morera y Céspedes, 1971. States. Am J Parasitology 1979; 65: 307.
dazol y levamisol. Sin embargo, no existe evidencia frijoles son una fuente de proteína vegetal muy im­ Bol Chil Parasitol 1970; 25: 133-4. Zambrano Z. Ileocolitis seudotumoral eosinofilica de ori­
portante, hace unos pocos años se calculó que la MoreraP,Ash LR. lnvestigación del húesped intermedia­ gen parasitario. Rev Latinoam Patol 1973;12: 43-50.
pérdida de frijolares atribuibles a los daños causados rio de Angiostrongy/11s costarricensis Morera y Cés­ ZavalaJ, Ramírez W, ReyesA, Bates M.Angiostrongilosis
por las babosas, alcanzó la suma de US$40 millones pedes, 1971. Bol Chil Parasitol 1970; 25: 135. costarrícencis. Primeros casos meidcanos. Rev Invest
en una sola cosecha; también son plagas agrícolas Morera P, Céspedes R. Angioslrongy/us costarricensis n. Clin 1974; 26: 389-94.
de otras plantas importantes para el hombre. sp. (Nematoda: Metastrongylidae) a new lungworrn Ziliotto A, Kunzle JE, Ruas-Femández JE y cols. An­
Paradójicamente, cuando esto sucede, los orga­ occuring in man in Costa Rica. Rev Biol Trop 1971; giostrongiliase: a presenta�ao de um provavel caso. Rev
nismos relacionados con la producción agrícola han 18: 173-185. lnst. MedTrop SaoPaulo 1975;17: 312-8.
implementado métodos de control de esta plaga que
son muy efectivos; debe entenderse sin embargo,
que la inversión en el control de estos invertebrados
se hace por las pérdidas económicas y no por la
amenaza que puedan representar para la salud del
hombre.
En conclusión, la única medida preventiva· que
podemos sugerir, es el control de los moluscos (y de
Figura 37-6. Arteria mesentérica en la que se pueden los roedores que participan en el ciclo), ya que una
observar varios cortes transversales de A. costarice11cis. vez contaminados los vegetales que se ingieren cru­
Hay engrosamiento de la íntima,' con lesiones ciel endo­ dos como las legumbres de ensalada, es muy dificil
telio las que eventualmente pueden provocar isquemia y desprender la secreción mucosa en donde podrían
trombosis. estar las larvas infectantes.
Capítulo 38 LARVASMIGRANTES 333

LARVAS MIGRANTES etilo, albendazol en dosis de 400 mg por 3 días, o


una dosis única de ivermectina 200 µg/kg, con alta
efectividad y buena tolerancia.
ISABEL NOEMI y ELSA RUGIERO
Prevención

Se resume en la mantención responsable de las


mascotas, con la consecuente desparasitación y eli­
minación de heces contaminadas en lugares donde
Definición. Infecciones del hombre producidas pasa al espacio aéreo, sube por la faringe, donde es puedan tomar contacto las larvas con la piel huma­
por larvas de nematodos de otros animales, general­ deglutida, y por vía digestiva alcanza el intestino na. No exponer la piel desnuda en suelos contami­
mente del perro y del gato, que pueden ubicarse en delgado, hábitat definitivo en el animal. nados con heces de estos animales y, lo más impor­
la piel (larva migrante cutánea) o llegar a los parén­ La infección del hombre ocurre al contactar su tante, efectuar educación para la salud al paciente y
quimas (larva migrante visceral). piel con larvas que permanecen en la tierra conta­ la comunidad, con el propósito de evitar adquirir
minada con heces de perros y gatos. Los más afecta­ esta infección parasitaria.
Biología dos son los niños por sus hábitos de jugar con tierra
o andar descalzos y tenderse en la tierra, vestidos LARVA MIGRANTE VISCERAL
Existen larvas de helmintos del hombre que en sólo con ropas ligeras o sin ellas. En los adultos, es
su ciclo biológico natural; migran por el organismo más frecuente entre los que manipulan tierra. TOXOCAROSIS
antes de alcanzar el estado adulto, como ocurre con
Ascaris /umbricoides, Ancylostoma duodena/e, Patología Este síndrome es producido en el hombre por·
Necator americanus y Strongyloides stercora/is. ascáridos de perros y gatos entre otros animales,
Pero en forma accidental, los tejidos humanos tam­ En el hombre, la larva penetra activamente por siendo los más importantes Toxocara canis, Toxo­
bién pueder ser invadidos por diversos parásitos la piel de los pies, piernas, manos y nalgas, la atra­ cara cati, Toxascaris leonina, Baylisascaris pro­
específicos de otros animales. Estas larvas pueden viesa y, como no se encuentra en su hospedero es­ cyionis y otros. De ellos, T. canis es el de mayor
tener distinto origen, pero comparten las caracterís­ pecífico, no completa su ciclo e inicia una migra­ importancia epidemiológica. Este parásito es un
ticas de no completar su ciclo evolutivo, por lo cual ción intraepidérmica que da lugar a trayectos linea­ nematodo de perros y cánidos y su ciclo varía de
migran, sin destino, por los tejidos del hombre, al les, tortuosos, eritematovesiculosos, de 1 a 2 mm de acuerdo con la edad de su hospedero. Su hábitat es
no ser éste su hospedero definitivo. ancho, que avanzan de 1 a 3 cm por día (Figura el intestino delgado de los perros. Cada hembra Figura 38-1. Larva migrante cutánea. Lesiones eritemato­
38-1). Las larvas se localizan entre el estrato ger­ coloca alrededor de 200.000 huevos al día, los que vesiculosas, lineales, tortuosas, que avanzan I a 3 cm por
minativo y córneo de la piel, produciendo una reac­ son eliminados con las heces y se hacen infectantes día.
SINDROME DE ción inflamatoria con predominio de eosinófilos. (huevos larvados), luego de estar dos a tres semanas
LARVA MIGRANTE CUTANEA en el ambiente si las condiciones de humedad tem­
Sintomatología peratura, calidad del suelo, entre otros facto;es, lo infectado. En el cachorro menor, las larvas atravie­
Descrito por Lee en 1874 para larvas que migra­ permiten (Figura 38-2). Estos huevos infectantes, san los alvéolos pulmonares, ascienden por la trá­
ban intraepidérmicamente. Se observó que las lar­ Los. síntomas fundamentales son prurito intenso pueden ser viables por varios meses, incluso hasta quea, alcanzan el esófago y llegan al intestino del­
vas procedían de estados evolutivos de diferentes y la impetinigización secundaria al grataje. por más de un año, dependiendo de las condiciones gado, en donde adquieren el estado adulto. En los
parásitos de animales, recibiendo los nombres de El pronóstico es bueno, debido a que en el hom­ geoclimáticas y del tipo de suelo en que se encuen­ perros mayores, las larvas pasan por los capilares
dermatitis linear, /arbich y larva currens. Es pro­ bre el síndrome de larva migrante cutánea es un tran. El perro de pocos meses, se puede infectar al pulmonares y de allí a la circulación general, alcan­
ducida por diversas especies de uncinarias de ani­ cuadro autolimitado por no tratarse de su hospedero ingerir los huevos larvados, liberándose en su intes­ zando los diferentes parénquimas como la muscula­
males, pero, en la mayoría de los casos, se debe a definitivo. tino la larva que atraviesa la pared y, por vía san­ tura estriada, el hígado, los riñones y el cerebro. En
Ancylostoma brazi/iense del perro y gato, y a A. guínea, llega al hígado y a los pulmones. La conti­ la mayoría de estos órganos las larvas son
caninum y Uncinaria stenocepha/a, del perro. Ade­ Diagnóstico nuación del ciclo depende de la edad del cánido inmovilizadas y englobadas en un granuloma infla-
más, se han descrito casos caracterizados por una
gran progresión de la lesión, conocida como larva El diagnóstico es fundamentalmente clínico. Se
currens, que se piensa, es producida por larvas de hace al observar las lesiones lineales característi­
S. stercoralis (ver el Capítulo 19: Estrongiloido­ cas. En forma excepcional, se ha obtenido la confir­
sis). mación del agente mediante biopsias.
En los hospederos específicos, sus ciclos evolu­
tivos no difieren del de las uncinarias del hombre: Tratamiento
los huevos eliminados con las heces del animal
infectado, maduran si las condiciones del suelo son El tratamiento se efectúa con tiabendazol, en
apropiadas, ·desarrollándose en algunos días una dos dosis de 25 mg/kg/día por dos a cinco días.
larva infectanté. Esta penetra al hospedero a través También se ha empleado con eficacia el tiabendazol
de la piel y por vía sanguínea llega a los pulmones, en crema. congelación de la larva, el cloruro de Figura 38-2. Huevos de To.tocara. (A) Recién emitidos. (B) Segmentado. (C) Larvado.
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LARVASMIGRANTES 335 il
PARASITOLOGJA MEDICA !l
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Patogenia \ TABLA 38-1


ANTECEDENTES Y PRINCIPAL SINTOMATOLO­
Cuando el hombre ingiere los huevos larvados
de estos nematodos, ocurre lo mismo que en el GIA EN CASOS DE TOXOCAROSIS SISTEMICA
hospedero habitual: salen de ellos las larvas, atra­ Sintomato/ogía N" de casos (%)
viesan la pared intestinal, iniciando su migración
por la circulación portal hasta el hígado donde con Antecedentes de pica o geofagia 122 92,6
frecuencia algunas quedan retenidas, mientras otras
Antecedentes dueños de mascotas 95 76,0
siguen por la circulación sistémica, pudiendo lle­
gar prácticamente a cualquier órgano, pero con ma­ . Síntomas pulmonares 81 64,8
·yor frecuencia son pulmones, cerebro, ojos, cora­ Compromiso hepático 75 60,0
zón e hígado los. más afectados. Puede comprome­ Síndrome febril 35 28,0
terse simultáneamente más de un parénquima. Este Manifestaciones cutáneas 28 22,4
parásito ocasiona daño por diferentes mecanismos,
siendo el más importante una reacción inflamatoria Palidez 18 14,4
caracterizada al inicio, por la fonnación alrededor Esplenomegalia 9 7,2
de la larva de granulomas eosinofilicos que tratan Compromiso del SNC 6 4,8
de encapsularla e inmovilizarla, y luego se agregan Miocardiopatía 3 2,4
linfocitos y células epitelioides gigantes. Posterior­
mente, se produce la liberación de antígenos Artralgia 0,8
excretorios-secretorios generados por el parásito,
elevación de IgE, IgG tipo 4 e interleucinas 4 y 5,
completándose la reacción inflamatoria. La mayo­
ría de las larvas permanecen latentes y son viables radas; nódulos que se pesquisan hipoecogénicos en
por varios años. Experimentalmente en ratas, se ha la ecotomografia o hipodensos en la TAC sin con­
comprobado que con la ingestión de 200 huevos traste y cuando se emplea este medio, se puede
Figura ·38-3. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión de Toxocara canis. larvados de T. canis, se produce un cuadro cuya apreciar una imagen hiperdensa en su interior);
duración oscila entre 12 y 36 meses. esplenomegalia; compromiso del SNC (convulsio­
nes, trastornos conductuales, hiperactividad e in­
Sintomatología cluso, hemiplejía) y miocradiopatía que puede lle­
matorio, salvo en el cerebro, donde al llegar a for­ Chile; en perros adultos fluctúa entre 2 y 100% en var a la insuficiencia cardíaca.
marse el granuloma, la larva ya ha migrado a otro diversos países del orbe, en tanto que en gatos es de La sintomatologia de la toxocarosis humana varía En el hemograma se puede observar desde re­
sitio. 50% de infeéción por Toxocara cati en Chile, y ampliamente (Tabla 38-1) y se describen diversas cuentos de eosinófilos normales a eosinofilia de
En el perro macho adulto y en las hembras no llega hasta 75% en otros países. formas clínicas. 5000-9000 eos/µL, siendo estas células maduras.
preñadas, todas las larvas se encuentran en los te­ Según diversos estudios realizados en algunos Hipergammaglobulinemia con predominio de IgG,
jidos, encapsuladas o libres. En las hembras preña­ parques de entretenciones de Santiago de Chile, se Toxocarosis asintomática. No presenta signos IgM y marcada elevación de IgE, con aumento de
das, al parecer por los cambios hormonales, las han encontrado huevos de Toxocara sp en 10,2% ni síntomas propios. Evoluciona con o sin eosinofi­ isohemaglutininas de tipo anti-A y/o anti-B según
larvas enquistadas se movilizan, migrando a través de ellos; a su vez, se hallaron estas formas infectan­ lia elevada (24% de los casos en nuestra experien­ el grupo sanguíneo del paciente.
de la placenta e infectando a sus fetos. Así, los tes en el 92% de áreas rurales de Salamanca (Espa­ cia).
cachorros pueden nacer infectados por via ña); en parques públicos de Gran Bretaña, 25% y Toxocarosis ocular. Especialmente grave es el
transplacentaria o hacerlo después de nacer, por entre 10 y 30% en lugares de juegos en USA; en Toxocarosís sistémica. De acuerdo con nuestra compromiso ocular que se presenta en nijios de
diversos mecanismos: ingiriendo huevos larvados, Irlanda, 15 a 38%, y en Japón entre 63 y 87,5% de experiencia (Tabla 38-1), la toxocarosis sistémica mayor edad, 1O ± 4 años, generalmente varones y
alimentándose de otro hospedero que porta formas los arenales de juegos de los niños estaban contami­ es predominante en niños de alrededor de 4 ± 3 años cuyas manifestaciones clínicas más relevantes son:
larvales del parásito (ratas, ratones, por ejemplo) o nados con estos huevos. con antecedentes de pica o geofagia y de ser dueños disminución de la agudeza visual (93% de los pa­
por la lactancia materna. Después de algunas sema­ Ciertamente por hábitos y actitudes, son los ni­ de mascotas. Habitualmente, pueden presentar sín­ cientes), exotropia (60%), leucocoria (27%), infla­
nas y luego de pasar por los pulmones, las larvas se ños de corta edad los más susceptibles de contraer tomas generales, como anorexia, astenia e irritabi­ mación del segmento anterior (27%). Sólo el 7% de
transfonnan en adultos en el intestino del animal, el la infección, aunque también en los adultos este lidad; fiebre de 37,5 - 39ºC; manifestaciones cutá­ los niños en que se compromete este órgano, queda
que comienza a eliminar huevos junto con sus he­ cuadro puede ser grave. Los estudios serológicos neas (eccema, urticaria, erupciones pruriginosas o con visión aceptable.
ces, completando as( su ciclo (Figura 38-3). practicados en población presuntamente sanas de eritema ·del tronco y extremidades inferiores), y ar­ Al examen de fondo de ojos, se puede hallar una
En cuanto al ciclo de Toxocara cati, es similar diversos países del mundo, demuestran una posi­ tralgias. El compromiso sistémico se manifesta a masa periférica (en el 33% de los casos), granuloma
al de T. canis, diferenciándose en que no hay infec­ tividad en California del 25%, en Pensilvania 54%, nivel de pulmón (bronquitis obstructiva recidivan­ macular (27%), endoftalmitis y granuloma vítreo
ción prenatal de los felinos recién nacidos. en Inglaterra 2%, y en el 8,8% de la población te, neumonitis o bronquiolitis aguda con infiltrados (26%), granuloma del nervio óptico (7%) y altera­
Toxascaris leonÍlla posee un ciclo igual al ante­ presuntamente sana adulta de Chile. En Italia se cambiantes en la radiografia del tórax y alteracio­ ción difusa del epitelio pigmentario con vitreitís
rior, infectando indistintamente a perros y gatos. han reportado cifras del orden del 4,4% en pobla­ nes de las pruebas de ejercicio, volumen respirato­ (7%) (véase Figura 46-2).
El T. canis es común en todo el mundo, la infec­ ción general, de 9,2% en pacientes epilépticos, y de rio forzado y espirometría); del hígado (hepatome­ Cuando existe compromiso ocular, frecuente­
ción de los cachorros oscila entre 23 y 40% en 10,6-87,5% en personas con retardo mental. galia, pruebas hepáticas normales o levemente alte- mente el cuadro cursa sin eosinofil ia e incluso con
336 e PARAS/TOLOGIA MEDICA LARVAS MIGRANTES 337

serología negativa o positiva a títulos bajos. En subtenonianos, vitrectomía, asociados o no al anti­ Epidemiology of human toxocariasis in la Reunión. mazine. Act Paediatr (Norway) 1993; 82: 116-8.
estas condiciones, es de utilidad el examen de fondo parasitario de elección. Se recomienda una muy Trans Roy Soc Trop Med Hyg 1994; 88: 531-3. Sapunar J, Verdaguer J, Zenteno J, Zenteno F. Larva
de ojos, en el que se puede observar una larva en buena evaluación en estos pacientes, ya que el ein­ Noemi Y, Gottlieb B, Herkovic P, Jorquera H. Compara­ migrans ocular por Toxocara. Análisis de 31 casos.
capullo (larva de segundo estadio). pleo exclusivo del antiparasitario puede asociarse a ción del rendimiento terapéutico del albendazol y Parasitol al día. 1989; 13: 21-3.
Debe considerarse que en el diagnóstico dife­ desprendimiento de retina. De ahí que sea aconse­ thiabendazol en el Síndrome de Larva Migrans. Rev Sommer C, Ringelstein EB, Kiniek R, Glockner WM.
rencial de esta patología se hallan el retinoblastoma, jable el análisis multidisciplinario de cada niño por Chile Infecto! 1989; 6: 201-4. Adult Toxocara canis encephalitis. J Neurol
la enfennedad de coats y otros tumores y uveítis. pediatras, parasitólogos y oftalmólogos para garan­ Noemi 1, Rugiera E, Viovy A y cols. Seroepidemiología Neurosurg. and Psychiatry 1994; 57 (2): 229-3 l.
iizar e.l menor riesgo al paciente. familiar de laToxocariosis. Bol Chile Parasitol 1994; Suiter TM, Schreíner-Suíter S, Glockner WM. Cerebral
Toxocarosis emergente o atípica. Se caracteri­ 19:52-9. immune vasculitis as complication of larva migrans
za por cursar con sintomatología difusa e inespecí­ Pronóstico Rasmussen LM,Dirdal M, Birkelaek NH. Covert toxoca­ infection caused by Toxocara canis. Medizinische
fica: dolor abdominal, compromiso articular, alte­ riasis in a child, treated with low dose dielycarba- Klinik 1993; 88: 445-8.
raciones del progreso ponderal, cefalea, urticaria, En los casos sistémicos es generalmente bueno,
etcétera. regresando las manifestaciones clínicas y de labora­
torio. En los casos oculares dependerá de la ubica­
Diagnóstico ción de la larva, del daño existente, oscilando entre
un compromiso leve de la función visual a la amau­
Se basa en la sospecha clínica, antecedentes de rosis total del ojo afectado.
geofagia y contacto con cachorros, leucocitosis y
eosinofilia (la cual no siempre existe), isoaglutininas Prevención
anti-A o anti-B elevadas. La confirmación diagnós­
tica se logra mediante la reacción de ELISA, cuya La prevención debe tender a evitar la infección
sensibilidad alcanza entre 70 y 91,3% y su especi­ en perros y gatos e impedir que los niños la adquie­
ficidad oscila entre 76,9 y I 00%. Se consideran ran. Para ello es importante efectuar educación para
positivos títulos EB 1/64 para Chile. la salud en la población, inculcando la posesión res­
En los cuadros oculares, la prueba de ELISA ponsable de las mascotas, su desparasitación, con­
puede s�r negativa o positiva a títulos bajos, siendo trol médico-veterinario oportuno y fomentar los cam­
de utilidad el examen de fondo de ojos, y el examen bios de hábitos de las personas, insistiendo en el
de ELISA es humor vítreo o acuoso. En este caso, cuidadoso lavado de manos y alimentos antes de
estos líquidos pueden tener títulos más elevados que ingerirlos, especialmente en aquellas situaciones en
los hallados en suero. En esta localización es tam­ que por juegos u ocupación, se manipula tierra (jardi­
bién de utilidad el diagnóstico por imágenes (eco­ neros, agricultores). Se ha demostrado que existien­
tomografía ocular o tomografía axial computari­ do un caso índice con infección en una familia de 5
zada). personas en prómedio, 3 tienen anticuerpos lgG po­
Recientemente se han ensayado otras técnicas sitivos a títulos significativos (dos niños y un adul­
para el diagnóstico, las cuales están aún en evalua­ to), independiente de su condición socioeconómica.
ción, como Dot-ELISA, inmunofluorescencia e in­ Sólo con una adecuada prevención primaria, se
munoelectroforesis. También en casos sistémicos evitarán los costos de salud, que pueden llegar a ser
especialmente con compromiso hepático se ha em­ muy elevados.
pleado la punción biópsica, con la cual se puede
observar el parásito; sin embargo, por tratarse de un
procedimiento a ciegas, tiene un bajo rendimiento, BIBLIOGRAFIA
aunque en la mayoría de los casos, pem1ite observar
el granuloma, sin lograr visualizar el agente. Altman NR. lntracranial infection in children. Top Magn
Reson lmaging 1993; 5: 143-60.
Tratamiento Epe C, Sabe!T, SchneiderT, Stoye M.The behaviour and
pathogenicity of Toxocara ca11is larvae in mice of
El tratamiento de los casos sistémicos se efectúa different strains. Parasitol Rs 1994; 80: 691-5.
preferentemente con tiabendazol 25 mg/kg/día por Fortenberry1, Kenney R, YoungerJ. Visceral larva migrans
5 días, asociado a corticosteroides en pacientes con producing static encephalopathy in an infant. Pediatr
severo compromiso ocular, respiratorio o cardíaco. lnfectDisJ 1991; 10:403-6.
También se ha empleado con éxito, en niños mayores Magnaval IF, Fabre R, Maurieres P, Charlet IP, Blarrad.
de dos años, el albendazol 200 mg diarios por 3 a Evaluation of immunoenzymatic assáy detecting
5 días. specific anti Toxocara immunoglobulin E for diagno­
En los casos oculares, el tratamiento dependerá sis and post treatment follow up of human toxocaria­
de la ubicación de la larva y la noxa generada por sis. J Clin Microbio! 1992; 30: 269-74.
ella, puediendo usarse corticoides sistémicos, Magnaval IF, Michault A, Calone N, Charlet IP.
Capítulo39 HIDATIDOS/S 339

HIDATIDOSIS
JORGE SAPUNAR

Definición. Hidatidosis, enfennedad hidatídica fonne provisto de cuatro ventosas y 30 a 40 ganchos


o equinococosis hidatídica se denomina a la infec­ dispuestos en áoble corona para su fijación (Figura
ción de animales herbívoros o del hombre con la 39-1). Presenta un cuello corto y una estróbila con
forma larval o metacestodo de párasitos del género sólo tres proglótidas: inmadura, madura y grávida.
Echinococcus y se denomina Equinococosis a la Esta última mide unos 2 mm, es decir, casi la mitad
infección principalmente del perro con el parásito del largo del parásito y su útero grávido contiene
adulto. Actualmente se acepta dentro del género 500 a 1. 500 huevos esféricos o elipsoidales de 40
Eclzinococcus cuatro especies: Eclzinococcus granu­ mm, cuya morfología es semejante a los huevos de
losus, E. multi/ocularis, E. voge/i y E. oligarthrus, Taenia sp. Estos huevos salen con las excretas del
siendo la primera la más frecuente. perro y contaminan su pelaje, el suelo, pastos, ver­
duras y el agua de bebida. De allí son tomados por
ECHINOCOCCUSGRANULOSUS los hospederos intermediarios: bovinos, ovinos,
porcinos y, accidentalmente, por el hombre y otros
Durante el estado adulto vive adherido entre las mamíferos de menor importancia epidemiológica
vellosidades del intestino delgado del perro y otros como el caballo, asno, gato, oso, conejo y rata.
cánidos como el lobo, chacal, dingo, etc. Mide 3 a El huevo ingerido por los animales y por el
5 mm d.e longitud. Tiene un pequeño escolex piri- hombre (Figura 39-2) llega al duodeno en donde se
libera el embrión hexacanto (oncósfera), el cual con
sus ganchos, atraviesa la pared intestinal y penetra
en los vasos sanguíneos tributarios de la vena porta,
siendo arrastrado hasta el hígado que actúa como
un primer filtro. Si franquea los capilares hepáti­
cos, alcanza las venas suprahepáticas y la cava
inferior llegando al corazón derecho y de allí por la
· arteria pulmonar, pasa a los pulmones. El hígado y
los pulmones son los órganos más afectados por la
larva de E. granulosus (Figura 39-3) y excepcional­
mente puede llegar al corazón izquierdo y por la
circulación arterial, a otras vísceras o tejidos.
Los embriones en los capilares hepáticos o pul­
monares aparecen como una masa citoplasmática
multinucleada de 30 a 35 mm, rodeada de leucoci­
tos. A las 6 horas se presenta como un nódulo de
unos 200 µm de diámetro. Después de 4 días, el
parásito de 30 a 40 mm ofrece un comienzo de
vacuolización central, futura cavidad quística y
evidencia de la próxima formadón hidatídica. A los
7 días, esta formación parasitaria llamada hidátide Figura 39-2. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión del Ecl,inococcus granulosus. A. Helminto adulto en el
tiene 60 a 70 mm, es esférica, francamente vesicu­ intestino del perro, su huésped definitivo. B. Huevo expulsado al exterior con las haces del perro. C. Formación del
lar y ya tiene su estructura definitiva esbozada y su estado larval o quiste hidatidico en los huéspedes intermediarios (herbívoros) (C 1) y accidentalmente en el hombre
pared presenta una capa externa laminar y otra (C2). D. El ciclo se completa cuando el perro ingiere quistes hidatídicos.
interna nucleada. El desarrollo de la hidátide es
lento, crece más o menos un centímetro por año. A
su alrededor el órgano parasitado reacciona for­ tener 20 o más cm de diámetro, pero en general el El quiste hidatídico comprende la hidátide,
mando una envoltura fibrosa llamada adventiciá; tamaño más común de las hidátides qscila entre 8 y metacestodo o larva propiamente dicha y la adven­
Figura 39-1. Ejemplar de E�hinococcus granulosus (3 a El crecimiento de la larva, en ocasiones, la lleva a 15 cm de diámetro. La hidátide más la reacción ticia o reacción tisular del hospedero (Figura 39-4).
5 mm de longitud). adventicia/ constituye el quiste hidatídico.
340 PARASITOLOG/A MEDICA HIDATIDOSIS 341

de grosor. Está formada por láminas concéntricas y mente se describen escólices ricos en glucógeno,
su composición química es semejante a la de la aptos para continuar su evolución en condiciones
quitina y es PAS positiva. La cutícula se comporta adecuadas (ortoescólices) y otros pobres en
como una membrana semipermeable qne permite el glucógeno que rápidamente se alteran y dejan libres
paso de sustancias coloides y cristaloides, no así de ganchitos (metaescólices). Se llama acefaloquistes o
gérmenes. quistes estériles a las hidátides que no forn1an vesí­
. b) Gern1inativa o prolígera. Es la capa intenia·, culas prolígeras ni escólices.
delgada, mide 15 a 20 µm de éspesor, de color - Ganchitos. Son formaciones de unos 30 µm de
amarillento y de aspecto finamente granular. De longitud. Fotman parte de la arenilla hidatídica y son
ella se desarrollan directa o indirectamente todos importantes para el diagnóstico microscópico de
los elementos de la hidátide. Desde el punto histo­ certeza de hidatidosis.
lógico, es una masa de aspecto sincicial con nume­ - Vesículas hijas (Figura 39-5). Tiene la misma
rosos núcleos, muy rica en glucógeno. estructura que la hidátide madre; es decir, cutícula
por fuera y germinativa por dentro, con capacidad de
Contenido de la hidátide. La hidátide tiene en formar vesículas prolígeras, escólices y líquido
Figura 39-3. Quistes hidatidicos múltiples en hígado de
vacuno, comparados con el tamaño de algunas frutas. su interior líquido y elementos figurados. hidatídico. Las vesículas hijas pueden ser endóge­
a) Líquido hidatídico. En una hidátide no alte­ nas o exógenas según se desarrollen hacia el interior
rada, el líquido, producto del metabolismo de la o exterior del quiste. Las vesículas hijas endógenas
Hidátide larva es totalmente transparente (agua de roca). Su aparecen en los quistes de larga evolución; por eso,
densidad es de 1.007 a l.012 y el pH 7,4. Esto habitualmente no se encuentran en los quistes jóve­
Es una esfera o vesícula de tamaño variable, fonnado por 98% de agua que contiene cloruro de nes de niños o de animales. El número de vesículas
llena de un líquido incoloro y transparente. Presen- sodio, glucosa, urea, ácido úrico y vestigios de hijas de una hidátide es variable, su tamaño fluctúa
ta un continente o pared y un contenido. albúminas y grasas. Este líquido posee propiedades entre 5 y 30 mm de diámetro y la mayoría son esté­
antigénicas. riles.
Continente o pared. Está constituido por dos b) Elementos figurados. Constituido por elemen­ La hidátide desarrollada en el hombre y en los
capas adosadas que tienen características morfoló­ tos microscópicos (vesículas prolígeras, escólices y bovinos habitualmente es esférica. En los ovinos
gicas e hlstoquímicas especiales (Figura 39-4). ganchitos) y macroscópicos (vesículas hijas). generalmente la fonua es variable. En el hombre
a) Cutícula. Es la capa externa, lisa, blanca como - Vesículas prolígeras. Se fonnan por yema­ comúnmente se desarrolla una hidátide y es poco
clara de huevo coagulada, su espesor es variable ción de la membrana germinativa hacia el interior frecuente observar dos o más quistes en un enfermo;
pudiendo alcanzar hasta aproximadamente 1O µm del quiste, las cuales crecen, se vesiculizan origi­ en cambio en el ganado, se observan numerosos
nando pequeñas vesículas unidas por frágiles quistes en el hígado y en los pulmones. La hidátide
pedículos a la prolígera. En su interior, se forman según las facilidades que se le presenten, crece más
los escólices tañ1bién por mamelonamiento, creci­ o menos rápido y su vitalidad depende de factores
miento e invaginación. Las vesículas prolígeras intrínsecos y extrínsecos. El parásito puede sufrir
miden 250 a 500 µm de diámetro y cada una con­ fenómenos degenerativos, calcificarse y llegar a morir.
ves
tiene 30 a 40 escólices. Al romperse el pedículo, A veces la hidátide se infecta transformándose en un
estas vesículas quedan libres en el líquido y a su vez absceso y la larva muere. En el hombre las hidátides
al romperse, dejan libres los escólices. hepáticas habitualmente son fértiles y las del pulmón
Al dejar sedimentar en un vaso cónico el líquido no lo son.
hidatídico se observa al fondo una especie de arena
blanquecina denominada por Devé arenilla hida­ Adventicia
tídica que observada al microscopio, aparece for­
mada por vesículas prolígeras, escólices y ganchitos Mal llamada periquística. Es una envoltura fibro­
libres por la desintegración de escólices. Devé cal­ sa, de espesor variable según el hospedero y el
cula que I mL de arenilla tiene unos 400.000 escó­ órgano afectado. Se forma por reacción del tejido
lices y como un quiste puede tener 4 a 5 mL de Figura 39-5. Vesículas hijas de un quiste hidatídico.
parasitado y �on la hidatide sólo está en contacto,
arenilla, se puede apreciar la enorme cantidad de existiendo un plano de clivaje quirúrgico entre ad­
escólices que pueden llegar a constituir parásitos venticia y cuticula. La calcificación de la adventicia
adultos cuando los quistes son ingeridos por un ovoideas de unos 200 µm en su diámetro mayor, que es un fenómeno regresivo, tardío que se produce en
perro o bien en el hombre pueden originar nuevas presentan en la unión del tercio posterior con los dos un 10% de los quistes hidatídicos hepáticos. En el
hidátides al romperse el quiste hacia una cavidad tercios anteriores, una hilera transversal de ganchitos pulmón no existe o es excepcional.
serosa dando hidatidosis secundaria, lo que tam­ refringentes. Desde el polo anterior hasta la hilera de
bién puede suceder en el postoperatorio muy tardío, ganchitos, tiene una hendidura que correponde a la Epidemiología
Figura 39-4. Quiste hidatídico. s'écción histológica. si no se aislay esteriliza cuidadosamente
· ·· · la hidátide invaginación del- escólex. En condic.iones fay9ra�,.
ad = adventicia; cut = cutícula; pro = prolígera o genni­ en el acto operatorio. bles, los escólices se evaginan presentando las cua­ La hidatidosis es una zoonosis que afecta prin­
nativa; ves = vesícula. - Escólices (protoescólices). Son estructuras tro ventosas y la doble corona de ganchitos. Normal- cipalmente a las regiones agrícolas y ganaderas. En
342 .. PARA SITOLOGIA MEDICA HIDA TIDOSIS 343

América Latina los países que registran los más alto en los casos con complicaciones. En las técni­ La sintomatología no es característica y es pare­
elevados índices de infección son Argentina, Chile, cas con punciones bajo ecografía o bajo visión cida a la de cualquier tumoración, pudiendo origi­
Uruguay, Brasil en el Estado de Río Grande do Su! laparoscópica, aún falta evaluar sus resultados a nar un síndrome tumoral (aumento de volumen del
y en menor escala, Colombia, Bolivia y Paraguay. largo plazo. órgano, rechazo de órganos, etc.), un síndrome do­
Otros países con elevado índice de infección son 6. Cerca del 70% de los casos de hidatidosis loroso y un síndrome de hipersensibilidad (prurito,
Argelia, Marruecos, Túnez, Chipre, Grecia, Italia, ocurre en personas en plena actividad productiva. urticaria, asma, hipotensión, muerte), según el ór­
Portugal, España, Yugoslavia y Australia. La para­ L_a mayoría de ellos son adultos con responsabilida­ gano afectado.
sítosis por E. granulosus en el perro, tiene frecuen­ des familiares, cuya enfermedad afecta la economía A continuación analizaremos las características
cia .muy variable. del grupo familiar. Además, el alejamiento del núcleo clínicas de las localizaciones más frecuentes y tam­
El hombre por ignorancia favorece el contacto familiar suele acarrear alteraciones emocionales. bién de algunas raras.
entre el hospedero definitivo del parásito (el perro) 7. Los sufrimientos morales son intensos y difí­
y otros mamíferos susceptibles de ser hospederos ciles de valorar y aliviar. Hidatidosis hepática
intermediarios, entre los que se incluye el mismo
hombre. Daños a la comunidad: Su localización más frecuente es en el lóbulo
Las causas que favorecen la difusión de esta l . El costo de las hospitalizaciones es alto. Los derecho y hacia la convexidad (Figura 39-6). En el
parasitosis en la naturaleza son el desconocimiento cálculos por gastos de hospitalización y tratamiento 80% de los casos hemos encontrado un solo quiste
del problema por la población, los hábitos y actitu­ en Argentina y Chile arrojan cantidades que van de y en el 20% fue múltiple, dos o tres quistes de igual
des perniciosas que facilitan la infección de los 1.500 a 2.000 dólares por paciente. tamaño; si son de diferente tamaño se debe pensar
animales y del mismo hombre, y la participación 2. La cantidad de enfermos que no han sido en una infección primitiva reiterada. El tamaño del
activa del hombre en la creación de condiciones diagnosticados y que existen en zonas rurales de las quiste hidatídico varia con la edac;I del parásito; se
ecológicas favorables al desarrollo del ciclo biológi­ regiones endémicas, es superior a las tasas de pro­ han encontrado quistes de 20 a 30 cm, y rara vez,
co (alimentación de perros con vísceras crudas medios anuales. mayores. El parásito crece generalmente conser­
parasitadas, matanza clandestina de animales y 3. En las regiones rurales y endémicas, las tasas vando su forma esférica (Lámina 31).
abundancia de perros). de infección son elevadas en los animales hospede­ En el hígado de ovino la hidátide es fértil cuan­
En Chile, se producen anualmente alrededor de ros intermediarios. En los ovinos, varía entre 25 y Figura 39-6. Quiste hidatídico del hígado, abierto, en el do llega a tener unos 2 cm de diámetro, en el hom­
800 casos nuevos de hidatidosis que según diferen­ 90% de los animales sacrificados en los mataderos. que se observa la adventicia, la cutícula replegada y bre la fertilidad suele ser más tardía y muchas veces
tes estadísticas, ocupan un promedio de 35 a 45 Las tasas en porcinos y en bovinos también son vesículas hijas. grandes hidátides son estériles. Las hidátides esté­
días-cama. El riesgo de muerte por hidatidosis al­ elevadas y como las vísceras parasitadas con quistes riles se llaman acefa/o hidátides. Cuando la nutri­
canza 6 al 7%. La enfermedad ataca en todas las hidatídicos deben ser decomisadas en los matade­ ción del parásito se dificulta o cuando envejece se
edades, siendo más frecuente entre los I O y 60 años ros, las pérdidas de alimentos por esta causa son el parásito y el hospedero: el parásito absorbe ele­ produce la vesiculización filial y se convierte en
La hidatidosis además de dañar al individuo enfer­ cuantiosas. mentos nutricios y excreta los productos de su me­ multivesicular. La vesiculización filial endógena es
mo repercute en forma importante sobre el grupo 4. Además de las tasas de morbilidad y de mor­ tabolismo. Las substancias generadas por la hidáti­ la más frecuente.
familiar y sobre la economía del país. talidad, se agregan los gastos por subsidios durante de difunden y penetran en la circulación originando La adventicia es una membrana calciopéxicá
La importancia médico-social de la hidatidosis la enfermedad desembolsados por los servicios de reacciones humorales y tisulares. En esta parasito­ que retiene más sales de calcio que otros tejidos. En
deriva del daño que produce al enfermo y a la comu­ seguro social y la menor productividad en el trabajo sis, el paciente se puede sensibilizar al pasar a la los bovinos es frecuente la calcificación; en el hom­
nidad, lo que Neghme ha esquematizado de la si­ de los enfermos corno consecuencia de la invalidez sangre material hidatídico y presentar a veces, cri­ bre se produce sólo en un 10% de los quistes
guiente manera: producida por la hidatidosis. sis urticarianas, hecho que tiene cierto valor y debe hidatídicos hepáticos. En general, la adventicia se
buscarse en pacientes de zonas endémicas. Los sín­ calcifica parcialmente, pero a veces se extiende a
Daños al enfermo: Patología tomas y su mayor o menor intensidad dependen toda la esfera.
1. Afección crónica de larga evolución que com­ principalmente del órgano parasitado. Los quistes hidatídicos hepáticos no complica­
promete la capacidad de trabajo de la persona antes, Frecuentemente se considera que la hidatidosis dos evolucionan silenciosamente por años, 1O a 30
durante y después del diagnóstico y del tratamiento. es una enfermedad benigna, sin compromiso del Sintomatología años o más, antes de originar sintomatología corno
2. Requiere hospitalización generalmente pro- estado general y de muy lenta evolución, en años. dolor en el cuadrante superior derecho del abdo­
longada. Sin embargo, creemos que siempre debe conside­ El embrión hexacanto desde que llega a los te­ men, a veces incluso de tipo cólico biliar, sensación
3. Para su diagnóstico y control posterapéutico rarse como una afección grave, porque destruye jidos, origina reacciones locales y generales, pero de peso en hipocondrio derecho y en epigastrio,
exige una serie de exámenes, la mayoría de costo tejidos en cualquier localización, además todavía durante largo tiempo, generalmente años, esas re­ tumoración indolora palpable por el enfermo o por
elevado (ecotomografia, tornografia computarizada, tiene tratamiento quirúrgico que con cierta frecuen­ acciones no causan síntomas ni originan signos el médico, intolerancia por alimentos grasos que le
radiografía de tórax, etc.). cia presenta complicaciones que pueden llevar a la ostensibles, evoluciona silenciosamente y se llega a ocasionan sensación de distensión abdominal y por
4. El tratamiento puede ser quirúrgico, quirniote­ muerte, o tratamiento quirnioterápico que también · evidenciar por su volumen o por sus complicacio­ último, manifestaciones alérgicas como urticaria,
rapéutico o asociado. Las operaciones pueden ser tiene sus problemas. nes. El quiste crece aproximadamente I cm por síntoma común a cualquier localización. A veces,
complejas y en ocasiones, puede existir riesgo de La sintomatología de la hidatidosis se puede año, pero esto es variable. En las manifestaciones una radiografía destaca una calcificación anular.
muerte. La quimioterapia, en general, es prolonga­ originar por fenómenos mecánicos de compresión, clínicas influye el grado de sensibilización del hos­ Los quistes centrales llegan a tener un gran ta­
da. por complicaciones del quiste (infección, ruptura) o pedero y el tipo de tejido parasitado. El período maño antes que aparezca sintomatología, salvo si
5. La mortalidad en las intervenciones clásicas por alteraciones inrnunológicas· provocadas·· por·'
0 asintomático varía para cada órgano y para cada existe algu na complicación como rotura hacia las
es alta y a pesar de los avances técnicos no se ha pasaje al hospedero de substancias de la hidátide. A localización, llegando en el hueso a ser de 20 a 30 vías biliares y·su obstrucción por vesículas o restos
logrado disminuir los riesgos de muerte, siendo más nivel de la cutícula se producen intercambios entre años. de membranas. Los de la cara superior comprimen
344 PARASITOLOOIA MEDICA HIDAT/DOSIS 345

el diafragma y la base pulmonar derecha producien­ complicado es asintomático o presenta síntomas lóbulo izquierdo del hígado, de tumores renales y
do síntomas respiratorios e incluso, pueden abrirse discretos como dolor vago, tos, expectoración o suprarrenales y de otras afecciones del bazo. Este
a los bronquios o a la cavidad pleural, originando disnea. A veces se diagnostican casualmente en un quiste puede abrirse al peritoneo. En caso de evolu­
una reacción de la serosa. Los quistes hidatídicos de examen radiológico. Cuando alcanzan cierto volu­ ción intratoráxica, rechaza el diafragma y levanta j
la cara inferior y del borde anterior del hígado pue­ men, puede encontrarse disminución del murmullo la parrilla costal; en raras ocasiones, hay abertura a
den palparse como una masa redondeada, de super­ pulmonar y matidez, signos que son más evidentes los bronquios apareciendo tos, expectoración, he­
ficie lisa, indolora y de consistencia quística. Ex­ mientras más grande y superficial esté ubicado el moptisis e hidatoptisis. La abertura a cavidad pleu­
cepcionalmente se puede encontrar el frémito quiste. ral origina el cuadro clínico de un derrame pleural.
hidatídico, sensación de onda que choca contra el La localización pulmonar evoluciona y se com­ En el quiste hidatídico del bazo con infección
dedo que percute, signo casi patognomónica. Cuan­ plica con mayor rapidez que la hepática. Precoz­ bacteriana secundaria, aparece un cuadro febril
do el quiste dé esta localización adquiere gran ta­ mente se produce apertura a los bronquios, porque
maño, comprime y rechaza los órganos vecinos y se la adventicia es de menor espesor que en el hígado. Figura 39-7. Quiste hidatídico del bazo. Hidatidosis renal (Figura 39-8). El quiste hida­
establecen adherencias con ellos; incluso pueden Esto explica la evolución más rápida a la ruptura e tídico renal es prácticamente siempre primitivo y
llegar a vaciarse en una víscera hueca como estóma­ infección. Los quistes hidatídicos pulmonares re­ rara vez coincide con otra localización del parásito.
go y colon originando en algunos casos, la cura­ chazan, comprimen y luego perforan los bronquios. mediastino y en las serosas, donde el parásito pre­ Es más frecuente en el riñón izquierdo, pero otras
ción. Estos quistes de cara inferior y borde anterior En el momento de la operación todos o casi todos senta la estructura habitual. En cambio, en el hueso estadísticas lo encuentran igual en ambos riñones.
del hígado pueden romperse espontáneamente por los quistes pulmonares aparecen comunicados con y en el encéfalo adquiere características morfológicas Por lo general, se ubica en los polos renales, excep­
álgun trauma o esfuerzo y derramar su contenido en los bronquios y casi la mitad están supurados. especiales. cionalmente lo hace en la región central, y crece
la cavidad peritoneal originando un accidente in­ Al romperse el quiste a los bronquios se produce hacia la periferia o hacia el hílio renal, pero en la
mediato o tardío: el shock anafiláctico y la hidatídois una hidatoptisis o eliminación con la tos o por Hidatidosis del bazo (Figura 39-7). El embrión mayoría sigue ambos desarrollos. La localización
secundaria, respectivamente. vómica de elementos hidatídicos macro y microscó­ hexacanto llega al bazo por vía arterial, originando preferencial eA-la sustancia cortical, se explica por­
La hidatidosis hepática dejada evolucionar pue­ picos (líquido de sabor salado, restos de membra­ un quiste hidatídico primitivo. Esta ubicación se que las arterias son terminales y los embriones se
de supurar por la penetración de gérmenes de la vía nas, vesículas y elementos de la "arenilla hidatí­ presenta en el O,7 a 8% de las hidatidosis. La loca­ ftjan en los capilares. La localización cortical per­
biliar, puesto que en el 90% de los casos, existen dica"). La vómica puede ser fraccionada, inaparen­ lización esplénica habitualmente es única; las loca­ mite a la hidátide una larguísima evolución silen­
comunicaciones pequeñísimas del quiste con la vía te y pueden acompañarse de hemoptisis. Si el quiste lizaciones múltiples son siembras peritoneales. El ciosa, porque los cálices recién se alteran cuando el
biliar. Puede llegar a reabsorberse el líquido de la hidatídico es evacuado a los bronquios en forma bazo tolera bien el crecimiento del metacestodo y parásito tiene unos 15 a 20 cm de diámetro. Además
hidátide, ·degenerar con calcificación de la adventi­ parcial, como sucede frecuentemente, se produce un por la falta de conductos excretores en este órgano,
cia. La calcificación parcial no indica necesaria­ hidroneumoquiste y luego una pioneumoquiste son excepcionales las complicaciones tempranas del
mente la muerte del parásito; en cambio, la total, hidatídico y en un 5% de los casos al quedar rete­ quiste (rotura, infección), por ello llega a tener gran
que origina una imagen radiológica llamada en bola nidos, en la cavidad elementos hidatídicos, el cua­ tamaño. Algunos quistes son de evolución toráxica
de billar, la asegura (véase Figura 49-2). dro llamado de "membranas encarceladas". En el ocultándose bajo la parrilla costal y otros son de
quiste roto las hidátide madre muere, pero si es evolución abdominal. Pueden ubicarse en el polo
Hidatidosis pulmonar fértil y tiene escólices, éstos pueden sobrevivir y superior o inferior del bazo y en relación al hilio
desarrollarse en la adventicia, bronquios o alvéolos; esplénico, pueden ser pre o retrohiliares, pero en
Es más frecuente en los lóbulos inferiores, pre­ si existen las vesículas hijas también pueden evolu­ cualquier localización pueden ser intraesplénicos o
ferentemente en el pulmón derecho. La mayoría de cionar. Los quistes hidatídicos que crecen hacia la emergentes. La vesiculización endógena es poco
los enfermos presenta un solo quiste. La equinoco­ superficie pulmonar pueden romperse a la cavidad común, pero no excepcional y sólo se observa en
cosis hidatídica pulmonar múltiple puede ser primi­ pleural originando una reacción serosa y rara vez enfermos adultos. La adventicia es gruesa y puede
tiva o secundaria. La múltiple generalmente es se­ una hidatidosis pleural secundaria, pues los quistes sufrir degeneración hialina y aún calcificarse, lo
cundaria. Las numerosas sombras radiológicas pul­ hidatídicos pulmonares en alto porcentaje son cual no es muy frecuente, pero tiene gran importan­
monares de tamaño casi uniforme hacen pensar en acefaloquistes. Evacuada la hidátide, en la adventi­ cia para el diagnóstico. Existen adherencias o
una siembra broncogénica. Estas hidátides no tie­ cia que queda es corriente ver orificios comunica­ periesplenitis acompañando a la mayoría de los
nen adventicia. dos con los bronquios. Esta- adventicia tiene poca quistes hidatídicos del bazo.
Los quistes hidatídicos pulmonares en el hom­ tendencia a colapsarse y desaparecer, pues se opo­ El quiste hidatídico del bazo no complicado
bre tienen forma esférica u ovoidea. Su tamaño nen a ello las secreciones bronquiales, 1� epiteliza­ evoluciona silenciosamente durante 20 a 40 años o
depende de la edad del parásito. Aunque sean muy ción y la insuflación de la cavidad hidatídica. En el más, constituyendo una masa que desplaza vísce­
grandes en el hombre adulto, no deforman el tórax hombre la calcificación de la adventicia en el pul­ ras. Por largo tiempo pasa desapercibido, eviden­
ni oradan las costillas. Los quistes pueden ser món no existe o es excepcional. ciándose por un síndrome doloroso de poca
intrapulmonares o emergentes. En el pulmón hu­ significancia clínica con sensación de peso en el
mano los quistes hidatídicos pocas veces tienen Localizaciones poco frecuentes cuadrante superior izquierdo del abdomen, poco
vesículas hijas, la mayoría son estériles, a lo inverso intenso, pudiéndose irradiar al cuello y escápula
de lo que ocurre con el hígado. Evolucionan silen­ La oncosfera después de traspasar el hígado y izquierda y cuando existe periesplenitis, el dolor se
ciosamente hasta adquirir cierto tamaño o hasta pulmones, puede localizarse por vía arterial en cual­ hace sordo y permanente. El síndrome tumoral
complicarse. quier órgano. Así existen_ localizaciones primitivas domina el cuadro. Se evidencian desp!azamiimtos
En la mayoría, los síntomas comienzan cuando en el bazo, riñón, corazón, páncreas, mama, órbita, del estómago, colon izquierdo, cola del páncreas y Figura 39:s: · Hidatidosis renal operada en un joven de
el quiste tiene 5 a 6 cm de diámetro. El quiste no músculos, genitales (Lámina 32), parótidas, tiroides, riñón izquierdo. Se debe diferenciar de tumores de 16 años. (Caso del Dr. Antonio Atias, Chile).
346 PARAS/TOLOGIA MEDICA HIDATIDOS/S 347

esta ubicación explica porqué casi todos los quistes puede hacerse de una vez o en varios episodios y ser humano no tolera hidátides muy grandes sin
hidatídicos renales son emergentes. causa casi siempre dolor precordial de intensidad síntomas, pero puede estar localizado en zonas
La mayoría de las hidátides son uniloculares y variable, náuseas, vómitos, diarrea, lipotimia y ur­ mudas y alcanzar mayor volumen, consultando a
fértiles, la vesiculización filial endógena es la regla. . ticaria. La rotura intracardíaca produce habitual- veces en la edad adulta. El volumen de los quistes
La adventicia es espesa y va incorporando los túbu­ mente graves fenómenos de anafilaxia; en cambio, varía entre 2 y I O cm de diámetro, con un promedio
los, glomérulos y vasos. La calcificación de la ad­ la rotura en el pericardio es generalmente menos de 8 cm. Son más frecuentes en el cerebro, muy
venticia es tan frecuente como en el hígado. dramática. La muerte súbita a veces puede ser la raros en cerebelo, hipófisis o istmo del encéfalo. No
El quiste no complicado es habitualmente indo­ primera manifestación de la afección (véase Figura hay quistes primitivos de los ventrículos y no se
loro y no pocas veces es un hallazgo del examen 47-5). debe confundir con quistes emergentes en la cavi­
físico, pero puede producir dolor lumbar y por com­ Cuando el quiste se rompe a las cavidades car­ dad o con una hidátide heterotópica ventricular, en
presión frénica o toráxica, provoca molestias respi­ díacas, además de las consecuencias generales y que al romperse la adventicia del quiste parenqui­
ratorias y abdominales: dolores cólicos, sensación locales, se puede producir embolia que según se niatoso, la hidátide entera cae al ventrículo. Tam­
de peso en el hipocondrio y flanco, constipación y trate de corazón derecho o izquierdo afecta al terri­ poco hay casos primitivos ni secundarios afectando
cólico nefrítico. torio de la arteria pulmonar o de la aorta. las meninges. Figura 39-9. Hidatidosis ósea.
La evolución es lenta con tendencia a abrirse a El diagnóstico diferencial se plantea habitual­ El quiste primitivo es casi siempre fértil y la
las vías urinarias, y una vez roto se infecta con mente con tumores y aneurismas del corazón; a vesiculización filial es más frecuente que en otras
facilidad y aparecen cólicos nefríticos e hidatiduria veces estos últimos se calcifican y el diagnóstico se localizaciones. La adventicia es muy tenue e incluso la hipertensión endocraneana se manifiesta por dis­
que se hace evidente por eliminación de vesículas y hace más difícil. El médico debe adelantarse a los puede faltar en zonas. La hidátide en el cerebro minución de la agudeza visual, trastornos de la
membranas. Abierta, la hidátide derrama su conte­ síntomas. Todo quiste hidatídico del corazón debe crece excéntricamente al ritmo habitual; cuando lle­ movilidad ocular, vómitos y bradicardia y al exa­
nido, y según sea la magnitud de la abertura, el someterse a intervención quirúrgica y si es posible, ga a la superficie del encéfalo las meninges pueden men de fondo de ojos, se aprecia edema o atrofia de
parásito puede sufrir las mismas consecuencias que antes que se rompa. adherirse y unirse a la adventicia y también crece la papila. Otros síntomas dependen de la localiza­
en el hígado y pulmón: eliminación parcial o total, hacia los ventrículos. La involución de la larva es ción; así, en la zona frontoparietal origina alteracio­
retención e involución. Esta eliminación de ele­ Hidatidosis de piel y músculos. Se refiere a poco frecuente y excepcionalmente se calcifica. Crece nes motoras (paresias, convulsiones) y alteraciones
mentos hidatídicos se exterioriza clinicamente con músculos estriados, no se conoce ningún caso segu­ aplastando y rechazando el tejido nervioso contra psíquicas; en la zona posterior, vértigos, altera­
cólicos nefríticos. La hematuria microscópica y la ro en músculo liso. Este quiste se presenta en el 4% las paredes del cráneo. Con ello disminuyen los ciones auditivas y alteraciones de la marcha y del
albuminaría son constantes. de las hidatidosis. Son de tamaño variable de 2 a 20 ventrículos y los espacios subaracnoideos, las equilibrio. Poco frecuentes son los síntomas de
cm de diámetro. Cuando son pequeños son esféri­ circunvoluciones se aplanan y los surcos cerebrales hipersensibilidad como edema, urticaria, prurito,
Hidatidosis del corazón. El quiste hidatídico cos, pero luego, por las contracciones musculares, se borran. shock. En resumen la sintomatología de los quistes
cardíaco abarca del 0,2 al 2% de los casos de hida­ toman la forma de la región, predominando la La hidátide se abre paso y asoma a los ventrícu­ hidatídicos del encéfalo es inconstante, polimorfo
tidosis. La infección cardíaca puede ser primitiva o ovoidea. Habitualmente son únicos y cuando son los y se rompe sufriendo el enfermo el impacto de y tardío. En la mayoría de los casos no traduce la
secundaria, pero por su frecuencia Devé demostró múltilples, se debe buscar una hidatidosis extraósea la inundación ventricular, con fenómenos de hiper­ gravedad de las lesiones ni la localización precisa
que prácticamente siempre es primitiva y que se proveniente de un hueso vecino. Son más frecuentes sensibilidad y efectos mecánicos. La rotura de los del parásito. El síndrome más sobresaliente es la
ubica principalmente en el miocardio, al cual llega en los músculos del tronco y segmento proximal de quistes hidatídicos ha sido observada especialmente hipertensión endocraneana.(Veáse el Capítulo 45:
el embrión hexacanto por las arterias coronarias. La las extremidades. Generalmente son fértiles y con­ en los ventrículos laterales, pero también hay casos Parasitosis del Sistema Nen1ioso Central).
localización en ventriculo izquierdo es la más co­ tienen vesículas hijas. En su crecimiento compri­ rotos al ventrículo medio y al cuarto ventrículo. La
mún y le siguen en orden decreciente, ventriculo men tejidos, especialmente vasos y nervios. Pueden rotura a los ventrículos laterales es más frecuente, Hidatidosis de los huesos (Figura 39-9). Co­
derecho, tabique interventricular, aurícula derecha, supurar y fistulizarse. La calcificación no es fre­ porque la localización más común de la hidatidosis rresponde al 1,5 a 2% de las hidatidosis. Las esta­
aurícula izquierda y tabique interauricular. No es cuente. es en los hemisferios cerebrales. Los elementos fér­ dísticas señalan la siguiente distribución en los
raro que coexista con quistes en otros órganos. El Su evolución es lenta y silenciosa presentándose tiles de la hidátide rota llegan al ventrículo y se huesos, en orden decreciente de frecuencia: colum­
volumen del quiste va desde el tamaño de una cere­ como una masa tensa, elástica, redondeada, a veces constituye una hidatidosis secundaria que puede na vertebral, coxal, húmero, fémur y tibia. En la
za al de una naranja. Es univesicular, pero precoz­ con fluctuación y excepcionalmente con el frémito tener las _siguientes formas: hidatoventrículo, columna ataca preferentemente las vértebras dorsa­
mente se hace multivesicular por el sufrimiento a hidatídico. Como tumoración muscular es móvil hidatidoventrículo e hidátide heterotópica ventri­ les y el sacro. La hidatidosis ósea difiere marcada­
que está sometido en este órgano. La adventicia más según el sitio de implantación, se inmoviliza cuan­ cular (ver Complicaciones). mente de otras localizaciones. El parásito crece
o menos espesa, con el tiempo presenta fenómenos do el músculo se contrae. Puede existir o no urtica­ La sintomatología depende de la localización mucho más lento que en otros sitios y el enfenno
involutivos como degeneración hialina y calcárea. ria. Se pueden confundir con lipomas, cisticercos, del parásito y de la sensibilización del enfermo, consulta después de 20 a 30 años de la infección,
El crecimiento de la hidátide se hace al ritmo habi­ aneurismas, sarcomas, hernias, etcétera. pero en general es aquella que acompaña a toda por ello en niños se ve muy pocas veces.
tual, lento y progresivo, distendiendo y atrofiando tumoración del sistema nervioso. La progresión de Proviene de un embrión hexacanto que llega por
las fibras musculares. Hidatidosis del sistema nervioso. En la hidati­ los síntomas es lenta, generalmente origina un sín­ vía arterial; es decir, es siempre primitiva, puesto
La infección bacteriana del parásito se observa dosis primitiva del encéfalo la oncosfera llega por drome de hipertensión endocraneano, escasos sín­ que no se ha comprobado hidatidosis secundaria
pocas veces, los gérmenes llegan por vía sanguínea. las carótidas. Esta ubicación se presenta en el 0,2 al tomas de localización, con buen estado general y ósea por invasión de una hidátide primitiva de los
Como en otras localizaciones, el quiste hidatídico 3% (véase Figura 45-4). Habitualmente única, po­ psiquis nonnal. El síndrome doloroso es el que ocu­ tejidos vecinos. El metacestodo en el hueso, desde
cardíaco no complicado evoluciona silenciosamen­ cas veces múltiple y en estos casos, debe sospecharse pa el primer plano y se caracteriza por cefalea que un comienzo toma su fonna característica de una
te por muchos años. Las complicaciones aparecen una hidatidosis secundaria. Los quistes de encéfalo evidencia la hipertensión. Esta puede ser difusa, a infiltración difusa por múltiples pequeñas vesículas
antes que en otras localizaciones. A medida·-que -pueden coexistir con otras localizaciones especial­ veces tiene el carácter de .hemicránea. o neuralgia, .. esféricas o multilobuladas que van invadiendo poco
crece, tiende a exteriorizarse hacia el pericardio o mente dél riñón o del bazo. La edad promedio que intensa, constante, rebelde ·al tratamiento sintomáti­ a poco el tejido óseo y lo van destruyendo. La para­
hacia las cavidades cardíacas. La rotura del quiste se presenta en clínica es a los I O años; es decir, el co y se exacerba con la tos y el esfuerzo. Además, sitosis progresa sin que se fonne adventicia; por
348 PARASITOLOG/A MEDICA HIDATIDOS/S

ello, no es un quiste hidatídico propiamente tal, placas radiográficas aparecen como espacios claros TABLA 39-1
como a veces se le suele llamar erróneamente. Cuan­ de tamaño variable; posteriormente, se ven las le­
do sale del hueso, puede adquirir la forma macrove­ siones groseras de la hidatidosis extraósea. La hida­ RESULTADO DE LA ROTURA DE UN QUISTE HIDATIDICO HEPATICO O PULMONAR
sicular en las partes blandas vecinas, siendo una tidosis ósea se ha confundido con quistes simples de Ubicación Rotura Consecuencia
forma de hidatidosis extraósea. Puede invadir los los huesos, angiomas, condromas, abscesos óseos,
huesos vecinos propagándose a través de los liga­ osteomielitis crónica, tuberculosis ósea, etcétera. Hígado a) Vías biliares Ictericia obstructiva
mentos. El disco intervertebral ni los cartílagos son En el tratamiento, el raspado o curetaje del hue­
invadidos por el parásito, pero pueden destruirse so es ineficaz. La idea es extirpar totalmente la b) Peritoneo Inmediata: shock
por alteraciones en su irrigación. lesión y, por ello, actualmente se realizan injertos o Tardías: siembra peritoneal
La infiltración parasitaria se efectúa sin reac­ se reemplazan los huesos por prótesis. hidatoperitoneo
ción inflamatoria y sin osteítis durante años. Por hidátidoperitoneo
acción mecánica, se agrega necrosis de origen is­ Complicaciones del quiste hidatídico
quémico formándose secuestros microscópicos y coleperitoneo
otros grandes. El periostio, que es levantado o per­ Las complicaciones que puede presentar un quiste hidátide heterotópica
forado por las vesículas, tampoco reacciona y se hidatídico son infección bacteriana, rotura, calcifi­ c) Venas o arterias Hidatidosis secundaria metastásica
deja empujar, distender y destruir. Cuando se agre­ cación y muerte. Por ser similares se analizarán d) Vísceras huecas (estómago, vesícula, etc.)
ga un traumatismo o una infección bacteriana, apa­ juntas las complicaciones en el hígado y en el pul­
e) Pared abdominal
rece osteítis, periosteítis y osteomielitis. món.
El hueso parasitado tiene una cavidad irregular J. Infección bacteriana. Los gérmenes llegan al
en cuyas paredes se ven microvesículas; en el canal quiste fundamentalmente por vía canalicular (bron­ Pulmón a) Bronquios Vómica
medular de los huesos largos, tienen mayor tamaño. quios y conductos biliares). Supurado el quiste, se b) Pleura Inmediata: shock
Si no hay hidatidosis extraósea ni fractura se con­ transforma en un verdadero absceso y el enfermo Tardías: siembra pleural
serva la forma externa del hueso aunque esté casi presenta fiebre y leucocitosis con desviación izquier­
vacío. da. Su tratamiento es quirúrgico. hidatopleura
La hidatidosis ósea no complicada no tiene sín­ 2. Rotura (Tabla 39-1). Puede producirse espon­ hidátidopleura
tomas o leve dolor de tipo reumático. Los síntomas táneamente por un traumatismo o accidentalmente hidátide heterotópica
de hipersensibilidad pueden presentarse igual que durante una intervención quirúrgica o por una pun­ c) Venas y arterias Hidatidosis secundaria metastásica
en otras localizaciones. Los enfermos consultan ción biopsia. El quiste en su crecimiento abre los
cuando notan una defonnación local o una tumora­ conductos y se introduce en ellos. La presión del d) Vísceras huecas (esófago)
ción vecina a un hueso o por una fractura. líquido hidatídico de 60 a 120 mm de agua es mucho e) Pared torácica
En la hidatidosis extraósea, el parásito crece y se mayor que la de la bilis dentro de los conductos, del
multiplica con ritmo lento, pero constante. Si la aire bronquial, de la orina, etc., lo cual explica el
barrera cortical del hueso es vencida, el parásito la aplastamiento, erosión, rotura y vaciamiento hacia L Hidatidosis secundaria peritoneal. Se produce Si el paciente supera lo anterior, meses o años
perfora y toma caracteres especiales, que puede te­ los conductos. Posteriormente, se ha comprobado habitualmente por la rotura de un quiste hidatídico después puede tener una forma de hidatidosis. peri­
ner tres modalidades: a) hidatidosis extraósea soli­ en el quiste pulmonar la epitelización de la cavidad. hepático, mucho menos frecuente del bazo. Roto el toneal. A saber:
taria; b) hidatidosis extraósea múltiple; y c) pseudo­ La rotura hacia las gruesas vías biliares intra­ quiste, el peritoneo reacciona y se produce una exu­ a) Siembra peritoneal. Se rompe un quiste fértil
absceso osifluente hidatídico, en el cual se distingue hepáticas ocasiona un síndrome de ictericia obs­ dación serofibrinosa. con escólices, el derrame seroso se reabsorbe, y con
una pared y un contenido. La pared la constituye el tructiva con cólicos biliares por la presencia de La rotura de un quiste supurado origina una el tiempo se produce una siembra generalizada o
periostio y las partes blandas, puede calcificarse y vesículas y membranas en el colédoco; a veces estos peritonitis aguda. El quiste aséptico roto también localizada a la región hepática, esplénica o pelvis
visualizarse en radiografias; el contenido es una elementos pueden pasar al intestino y salir con las puede ocasionar un cuadro clínico agudo si el pa­ (Lámina33).
masa granulosa formada por la acumulación de ve­ heces. La rotura a los bronquios es generalmente ciente está sensibilizado. El enfermo presenta un b) Hidatoperi/oneo. Se produce por la rotura de
sículas, secuestros y escaso líquido habitualmente alarmante por la eliminación de gran cantidad de shock anafiláctico con intenso dolor abdominal, un quiste univesicular, no fértil, sin bilirragia, que
turbio y a veces, con sangre. Es de muy lento desa­ elementos hidatídicos, tos y disnea, pero rara vez vómitos, diarrea, cianosis, urticaria, fiebre, taqui­ ocasiona una exudación serosa de corta duración. Es
rrollo, sin fenómenos inflamatorios, sin dolores y produce la muerte del paciente; es frecuente la in­ cardia, pulso filiforme, hipotensión arterial y poco frecuente.
suele pasar inadvertido, evidenciándose sólo por un fección posterior de la cavidad residual del pulmón. contractura abdominal. El hemograma en este mo­ c) Hidatidoperitoneo. Se rompe un quiste hida­
aumento de volumen que deforma una región o por La rotura hacia las cavidades serosas origina una mento revela hipereosinofilia que dura unos pocos tidico fértil con vesículas hijas que origina una reac­
una radiografia. hidatidosis secundaria que es grave en el ser huma­ días. En horas, el enfermo puede fallecer o sus ción peritoneal con líquido en donde flotan los
Las complicaciones más comunes de la hidati­ no y que excepcionalmente se produce en los ani­ síntomas y signos regresar paulatinamente. En otros escólices y vesículas, todo lo cual está delimitado
dosis ósea son la infección, la fistulización, la frac­ males. casos, la reacción peritoneal es ligera y los sínto­ por una pseudomembrana perivisceral. Si el quiste
tura, la invasión de otros tejidos y la compresión, 3. Calcificación. Aparecen en quistes hepáticos, mas atenuados. La asociación con fenómenos estaba previamente comunicado con la vía biliar, el
especialmente, del tejido nervioso.· esplénicos y renales con muchos años de evolución. alérgicos ayudan a sospechar el diagnóstico. A líquido es bilioso y se denomina coleperitoneo
El diagnóstico es prácticamente imposible en las La adventicia sufre procesos de degeneración y se veces el paciente tiene la sensación de que algo se hidatídico.
etapas iniciales. Los signos clínicos locales y gene­ calcifica, lo que se pesquisa macroscópicamente y le rompe en el abdomen y que un líquido se vierte. d) Hidátide heterotópica. Es muy poco frecuen­
rales son de aparición tardía.,La.radíografia evi.den­ en radiografias. Se produce aproximadamente en el Finalmente,, en ciertos casos .no, se siente ningún te. Se rompe la adventicia del quiste vis9�_ral y la
cia las lesiones avanzadas, cúando las vesículas 10% de los quistes hepáticos, no existiendo prácti­ trastorno y días después;• puede tener una crisis hidátide entera cae al peritoneo en donde se implan­
destruyen el hueso y aparecen aréolas que en las camente en el pulmón. asmatiforme o urticaria. ta.
H/DAT/DOSIS 351
350 PARAS/TOLOGIA MEDICA

Hidatidosis secundaria pleural y pulmonar. Diagnóstico Con la introducción del método de ELISA-IgG Ecotomografía o ultrasonografía. Este examen
El quiste hidatídico pulmonar se puede abrir hacia se ha obtenido mayor sensibilidad y especificidad, en nuestro medio es el método inicial de estudio por
los bronquios y con menor frecuencia, a la pleura. La En el diagnóstico es conveniente averiguar la aumentando su rendimiento en las localizaciones ser no invasivo, sencillo, de bajo costo y ha demos­
abertura hacia la pleura origina cuadros equivalentes procedencia del paciente, contacto con perros (94,7% hepática y especialmente pulmonar. En nuestra trado ser de gran utilidad en la detección de lesiones
a los que aparecen al romperse un quiste visceral del positivo en nuestra casuística), existencia de otros experiencia la positividad global de ELISA lgG fue ocupantes de espacio en el hígado, especialmente
abdomen en el peritoneo. Debido a que el quiste familiares con quiste hidatídico (34,6% de nuestros de 94,62% y 94,3 y 92,9% para las localizaciones l�s d ; _naturaleza quística. En el caso del quiste
hidatídico pulmonar roto está comunicado con los enfennos). Recordar que la hidatidosis tiene una hepáticas y pulmonares respectivamente, con exce­ h1dat1d1co la ecotomografia pennite hacer en mu­
bronquios, se produce un neumotórax seguido de un lárga evolución y habitualmente sin compromiso lente especificidad (semejantes resultados tienen chos casos el diagnóstico exacto, ubicar el lóbulo
derrame pleural que rápidamente se transfonna en del estado general. El trémor o frémito hidatídico otros autores). Esto ha mejorado el diagnóstico de hepático afectado, detenninar su fonna, tamaño
un empiema por la llegada de génnenes por vía bron­ cuando se encuentra en el examen físico pennite la hidatidosis así como el control postratamiento, número.y contenido, infonnar la relación del quist;
quial. Los quistes pulmonares en su mayoría son plantear esta afección, pero su hallazgo es excep­ buscando no sólo anticuerpos sino también antíge­ con la vía biliar y grandes vasos, demostrar com­
estériles y además, si no lo fueran, la colección cional. nos circulantes (ver Sexta Parte: Diagnóstico de plicaciones y descubrir su presencia en otros órga­
purulenta altera la vitalidad de los escólices que Para el diagnóstico se recurre a los siguientes laboratorio). nos abdominales.
hubieran llegado a la pleura, por ello es rara la siem­ exámenes de laboratorio: hemograma, intradenno­
bra pleural. rreacción de Casoni, reacciones serológicas, exá­ Exámenes radiológicos. Puede hacerse en cual­ Tomografía axial computarizada (TAC). Se
La hidatidopleura, homóloga al hidatidope­ menes radiológicos, cintigrama hepático, ecotomo­ quier localización del quiste, pero siempre debe puede aplicar en cualquier localización del parási­
ritoneo, es una colección líquida, a menudo pu­ grafia, tomografía computarizada, resonancia mag­ solicitarse radiografia de tórax para descartar hida­ to. Da imágenes más anatómicas, más claras y de­
rulenta, acompañada de neumotórax y pleura muy nética y exámenes parasitológicos de líquidos orgá­ tidosis pulmonar asociada. Los quistes hidatídicos tecta lesiones muy pequeñas. Tiene mayor sensibi­
engrosada. La hidátide heterotópica pleural es muy nicos en casos de quistes comunicados con el exte­ pulmonares no complicados presentan una imagen lidad y especificidad que el cintigrama y la ecoto­
rara. rior. de fonna redondeada, de límites precisos (véase mografia en el estudio de lesiones focales hepáticas.
Figura 48-1 ); sin embargo, imágenes semejantes El hígado nonnal aparece en las placas como una
Abertura en vísceras huecas. Una hidatidosis Hemograma. Por lo común en hidatidosis no pueden presentar las neoplasias. A veces puede verse estructura homogénea y las lesiones quísticas como
hepática de evolución abdominal se puede abrir en hay eosinofilia o, si existe, es de poca magnitud. En en esa imagen una pequeña depresión periférica imágenes bien delimitadas, menos densas que el
raras ocasiones en el estómago, duodeno, vesícula, nuestra experiencia, el 69% de los casos tuvo cifras llamada el signo de la muesca. La radiografía de hígado nonnal y puede evidenciar membranas y
colon o pelvis renal, y un quiste pulmonar también nonnales de eosinófilos, por ello no tiene práctica­ tórax aún tiene mayor valor en quistes pulmonares vesículas hijas.
excepcioi:ialmente a esófago. mente utilidad para el diagnóstico. En caso de ro­ complicados (véase Figura 48-2): cuando penetra
tura de una quiste visceral a serosa, puede aparecer aire entre la adventicia y la cutícula aparece una Resonancia nuclear magnética. Es el más re­
Rotura a vasos. La abertura de un quiste en hipereosinofilia de unos pocos días de duración. zona clara alrededor de la hidátide, es el signo de ciente avance en las técnicas de imágenes para es­
venas es poco frecuente y más rara aún en arterias. la neumoperiquística. Si el aire penetra en el inte­ tudiar cualquier órgano y en especial el hígado. El
La rotura en vasos ha sido comprobada en quistes Intradermorreacción de Casoni. Es una reac­ rior del quiste se encuentra la imagen del doble hígado aparece de color gris homogéneo, más in­
hepáticos (Figura 39-1 O), pulmonares y en la hida­ ción fácil de realizar y de leer, pero debe hacerse arco. Con mayor cantidad de aire aparece un nivel tenso que el bazo. Las lesiones con líquido (quiste,
tidosis ósea. Una consecuencia de la rotura en vasos con buena técnica y antígenos estandarizados. Pue­ líquido horizontal con membranas flotando, es el necrosis, etc.) aparecen más claras, evidenciándose
o en el corazón es la hidatidosis secundaria metas­ de ser útil especialmente en sitios en donde no se -l signo del camalote; y, finalmente, un quiste pulmo­
nar sin líquido y con membranas retenidas tiene la
si existen estructuras intraquísticas.
tásica que se origina de escólices. pueden hacer reacciones serológicas. Según dife­
rentes autores tiene una sensibilidad que va del 40 imagen poligonal. Todas estas imágenes radiológicas Laparoscopia. Es la observación directa de la
al 90% o más; esta diferencia se debería a la falta de son características, pero no patognomónicas. cavidad abdominopelviana y su contenido por me­
estandarización de los antígenos empleados. La Calcificaciones no se observan en los quistes dio de un instrumento óptico con iluminación, el
reacción positiva precoz es la que tiene valor diag­ pulmonares. Los quistes de la convexidad del híga­ laparoscopio. Según nuestra experiencia, el quiste
nóstico. Puede presentar falsos positivos en casos de do en la radiografía de tórax o de abdomen simple hidatídico puede aparecer como una defonnación
fasciolosis o triquinosis. Siempre debe interpretarse pueden originar elevación y defonnación del dia­ del hígado cubierta con tejido normal; si es más
en conjunto con la clínica y los otros exámenes, Su fragma y si existe calcificación se puede ver como superficial puede aparecer como una masa grisácea
uso es cada vez más restringido. halos concéntricos o en bola de billar. A veces se por la adventicia y más superficial puede transpa­
pueden demostrar compresiones o rechazos de ór­ rentarse la cutícula y tomar color blanco caracterís­
Reacciones serológicas. La inmunoelectro­ ganos. tico. También como cualquier masa intrahepática,
foresis tiene una especificidad de 100% cuando se puede desplazar el ligamento falcifonne. Se pueden
detecta el arco 5° de Capron, pero su sensibilidad no Cintigrama hepático. El quiste hidatídico he­ ver quistes hidatídicos del bazo y la hidatidosis
es muy alta, por lo cual un resultado negativo no pático se aprecia como una zona hipocaptante, re­ peritoneal. Creemos que este examen, si el diagnós­
descarta la hidatidosis. La hemaglutinación indi­ gular, habitualmente única, pudiendo precisarse su tico está suficientemente claro, no debe realizarse
recta y la aglutinación en látex tienen sensibilidad ubicación, tamaño, fonna y número. Sí se utiliza el por riesgo de ruptura del quiste.
y especificidad que varía según el método emplea­ pool sanguíneo, aparecen como zonas avasculares,
do; en nuestro medio la reacción de hemaglutinación mientras que los tumores habitualmente aparecen Exámenes parasitológicos de líquidos orgáni­
indirecta tiene una sensibilidad global de 76,82% vascularizados. El cintigrama se debe realizar por cos. Puede reconocerse cualquiera de los elementos
Figura 39-10. Hidatidosis secundaria metastásica por (en hígado 77,1% y en pulmón 64,32%). La reac­ lo menos en tres posiciones y está indicado en hida­ del quiste como cutícula, vesícula, escólices y gan­
rotura de un quiste hepático con diseminación sanguínea. ción didmnunofluorescencia indirecta es muy sen­ tidosis de cualquier órgano. Actualmente su uso,es chitos con lo cual se hace el diagnóstico de certeza.
Protoescolex sorprendido en una vena hepática. '(Caso sible y específica, pero su uso está restringido a escaso preferiéndose la ecotomografia y la tomogra­ Para que estos elementos macro o microscópicos
del Dr. Antonio Atías, Chile). laboratorios especializados. fía computarizada. sean observados, el quiste tiene que haberse roto y
HIDATIDOS/S
PARAS!TOLOGIA MEDICA
352
a toda e dad si� central ��vi taría con escaso líqui do y restos de humana. Ademá s, el Spe othos ve naticus rara ve z se
do al exterior. Lo Esencial es la educación del hombre -
t eJi�� necro!lco. Se dice que son formas parasitarias
.
bserva, p or ello parece tener poca importanc1a en 1a
por una vía na tural estar comunica el quiste hi da­ en el hospi­
y en todo nivel cultural, especialmente co n hi da­
o

b rv ester¡les, pe�o 1� i no culación de p equeños fragme n­ infe cción hum ana.


te
más frecuente es su o tal cada vez que se presente uri pacien
se ació n en

t ídico pulmonar abie


rto a los bronquios. Se debe Fund men a d r conocer el problem a
tos de gerrrun�!lva en un hospe dero son capaces de �n el -�ospe dt;ro intermediario natural, no. hay
id atíd ico ·o tidosis. es a a
generar un qmste. prohferac10n endog. ena y. las larvas d e E• voge1s
ión de u n qu iste h
a t l
iciales. Entre 1 on
anotar que la punc
signi ficar la muer­ y cambiar hábitos y acti tudes pe rjud El aspect_ o m acroscópico del parásito semeja apat' ogenas, sa1 vo mfecc1ones m asivas. En ca b.
masa sosp ec hosa de serl o, puede a de ellas, nunca com r in va rs e l a s man os, lavar bie n
a largo plazo, una form
la
e s
se consumen crudas, no una neoplasia Y su e volución p are ce Ja de un cán­ en el ho!°b;e e _ st e _p�it o es cau sa de una enf���
te brusca del paciente o las verduras y frutas que
. istes. Otras cer de lent o desarrollo . El p aci ente puede presentar dad _ Pohqmstica, mvas1va y se disemina hasta pro­
hidati d undari a li mentar perros con vísceras con qu de mat a­
osis sec a
dolor en el hip?con&:ío derecho o en el epigastrio d?crr_ un �roce�o hepático extenso. Existen casos de
medidas convenientes son la co nstru terinario, el
cción
ve Y �ep a�omeg�l)a, pudiendo incluso llegar a la insu­ hidat�dosis p ohquística en Costa Rica, Panamá, Co­
Tratamiento deros adecuados con control médico fi�ie_ncia hepatlca. L a m asa en su crecimiento puede lombia, Ecuador, Vene zuela y Brasil.
control del perro y el t
ratamiento de los animales
vedades y mu­ ongt_n'.1; o bstrucción biliar y p ort al. Es posible la El _dia��stico generalmente se hace en el exa­
T odavía se van presentand o no la hi datidosis , parasitados. apan�mn de metástasis en el pulmón y cerebro con
h n gn itas e n el tratamiento de II;en histol?g¡co de piezas quirúrgicas o de autop sia.
c as i có
reduciendo
p r c rt e que pare ce que se están
e o lo ie o s ECHINOCOCCUS MULTILOCULARIS
los smtomas correspondientes. En su crecimiento Sm tratamiento el pronóstico en Ja mayoría de l os
las indicacion es quirú
rgicas o por lo menos se están p�ede extenderse al diafra gma, t órax y pared abdo­ casos es m alo. E l tratamiento quirúrgico en algunos
. is alveo­ mmal. ca;ms ha �ado res�tado. También se intenta la qui­
asociando a la quim ioterapia o existe n Es el agente etiológico de la hidatidos El_ diagnós�co en el hombre es difi cil. Se utilizan mmterapia con denvados benzimidazólicos que son
En el t ratamiento quirúrgi co c lásicn sus indi ­ l r. T ene un a m orfologí a y desa rrollo
comp leta­
una co los mismos examenes que en hidatidosis La larva de la esperanza terapéutica.
varias técnicas operatorias, cada una compleja
a i

nto se utiliza, por mente diferente a E. granulosus, con E. '!1!tltilocularis en el hombre casi �unca tiene
caciones precisas. Este tratam ie r, form arv m etacestodo.
rtos a la vía bilia o
escohce� Y �u identi�cación se basa en el hallazgo ECHINOCOCCUS OLIGARTHRUS
ejemplo en quistes hepáticos abie istes hepáticos
al
ncuentra
a l
L a hidatido sis alveolar humana se e de gerrrunattva y cutícula.
en quistes s upurados
, en algunos qu m n n ur d Al em ania, Suiza, T iro!,
ria peritoneal, etc. Hace prin c p s e
L os pacientes no tratados tienen una evolución , El cest o�e m i de 2,9 mm de l ongitud, siendo la
e te e el
sia, pero t ambién se han
i al
con hi datidosis secunda noroeste de China y Ru
bió enérgicamente t:atal en el 7�':-- En las infecciones precoces es fac­ m as pe quena d e l as esp ecies de Echinococcus
muc hos años se hizo y se proscri iegas, comunicad ca n Itali a , Francia , Po loni a , Bal­
t ible l a ?1!1"acion p�� extirpación quirúrgica comple ta :ant� el a dulto como la larva de E. o/igarthrus s�
e
ciones percutáneas a c
sos
Turquía, Tunisia, J apón,
o
el trata mien to con pun can es, Austria, I g rr ,
otomogra fia o bajo
a
n late
del pan1;51to. Tamb1en se ha indicado Ja quimioterapia identifican por el t amaño de los ganchitos. Los
pero ahora se puede hacer bajo ec Canadá, EE.UU. (A k ), Uruguay y Argentina.
ecto, existen nu­
a
c on denvados benzimidazólicos. En animales se lo­
las
hosp ederos d e�itivos de esta esp ecie son carní­
visión laparoscópica. A este resp no comunican E l verme adulto, al go más
pequeño que E. gra­
gra l_a reducción de la larva, d etención de la prolife­ voros de la farrulía de l os felinos: el gato jaguarundi
ral,
merosas casuísticas que, en gene t enen u , v v e en el i ntestino delgad
o de un cá nido , _
import an tes, pero n o
nu/o s i
racion Y e?,el hombre induce m ejoría del paciente y el pum a, el j aguar, el o ce lote, e l g ato de Geoffroyy
acci dentes anafilácticos eros Vulpes
s
os definitivos zorros (gén
i
largo plazo com
nd h ped r prolongac10n de la sobrevida. el gato d e las pampas. E s tudios expe rime nt ales de­
un seguimiento de los enf ennos a atid osis secun-
os e
vajes. E l perro
o sie o
y Alop ex), lobos, co yotes y pe rros sal
mueStran que E. o/igarthn1s se desarrolla bien en
para descartar que no harán una hid doméstico puede reemplazar al hosped
ero de finiti­
ECHINOCOCCUS VOGELI el _ga�o domé s tico. S on hosp ederos int ermediários
daria peritoneal. l, p r end s r ún ica fuente de i mpor­
es h epáticos vo na tur o e la
pnncipalmen(e el �gu!í, la ra ta espinoza y el p aca..
Como parte del tratamiento en quist
a eci
atos d omésti­
a

r y con ictericia obstructiva, se ta ncia en la infección humana. Los g Rausch Y cols. (1981 ), detallaron su morfología y La larva se ubica pnnc1palment e en los tejidos ínter-·
ab iertos a la vía b ilia · rven m h p d r os definitivos , a
pica y ex trac­ cos tambi én
o os e e
s i co
la evolución del estado larval. E. voge/i es relativa­ mu�c:1Iares de l as _Patas y lomo y en las vísceras
puede reali zar papilotomía endoscó dosis ósea, pesar de no i nfectarse con E. gran11los11 e E. mul­
s. El hombre
mente l argo y delgado, con una anchura similar en t orac1 cas y abdommales y su estructura es simil ar
m nt hid atídicos. En hid ati huevos d
ción d dqu r e la infección ingiriendo
e os
éxit
e ele
hasta ahora no ha enid o a ie
, verduras y t oda s_u_ extensión, mide 5,5 mm de longitud. En la ª 1� de E. voge/i. E ste parásito se h a encontrado en
el tratamiento méd ico ti/oc11/aris que contamin an tierra, aguas
t o
osible debe ser lo proglotida m�dura el poro genital es lateral y Jigera­ a nunales en Costa Rica, Panamá, Co lombia, E c ua­
y el tratamiento quirúrgico, en lo p njertos óseos. fru tas. II;e�te postenor. Se encontró en el Ecuador en un
_
dor, Bras il Y Argentina. Ultimamen te se ha confü­
más radical con exéresis, prótesis Actúan como hospederos i ntermediari
os roedo-
o i
benzimida­ carudo Sp �tlzos ve naticus, que es el único hospe­ n:iad o la existencia de algunos casos humano s p ara­
La quimioterapia con compuestos r s de mu h sp ecies (géne ros Micro tus,
Lemmas, 7
endazol y luego d ero defimtivo natural conocido, existe en América s itados p or larvas de E. o/igarthrus.
zólicos i ni cia do en 1974 con meb ecialmente con
c as e
a larval con abundan tes
e
.), l a z nd la form
con ot ros derivad os, se h ace hoy esp
etc oc li á ose
a infe c ción c rónica prese
n­ Central y en el oeste de América del Sur. E l estado
apia escólices en el hígado. L
combinación con la ter or extensión o por
larval se desarrolla en un hospedero intermediario
al bendaz ol solo o en d r rg n p
ta compromi os ó a os
so e ot
de la larva natural, el paca ( Cuniculus paca), roedor americano. BIBLIOGRAFIA
quirúrgica . o nar o metástasis. El cr ecimiento y d esarrollo ado. En el
Creemos que en el quiste hid atídico pulm se de­ de pende d e la especie de h os p e d er o afe c t En . el ,P�ca Y la nutria l a l arva es u na h idátide
on�s,
l
�ohqmst1ca que se localiza en el hígado; este quiste
hepático no compli ca do, salvo exce pci del pará sito está Atías �- Tratamiento médico de la hidatidosis. Parasitol al
d v ­ h mbr ta mbién el sitio pr imario
es pué tiene una pared formada p or germinativa, cutícula y
bería empezar con quimioterapia y d ­
e
o allí una m asa de aspec
s e a o D1a 1993; 17: 153-7.
al tr atamiento e n el hígado, consti tuyend p or fue�a una capa d: tejido conjuntivo, que p ermite
r ias curas, si no se tiene éxito se i ría m rf , pr l iferante, invasora, orig
inada de la Con�eras M, Gallo S, Salinas P, Sapunar J y cols. Evalua­
r quimiotera­ ver ves1culas en su mterior.
quirúrgico. T ambié n se debiera indica a unque el
a o o o
lices, a la
to c16n de la E�ISA lgG usando un antígeno purificado en
eal, ge rmi nativa y raramente contiene escós. E stá for­ En América del Sur, el p aca se utiliza como ali­
_ _
pia en casos de h idatidosi s periton
el d1agnost1co de la hidatidosis humana. Bol Chil
inver d qu e o curre en los roedore
cam e nte. mento por su apreciada carne y sus vísceras son a
paciente haya sido intervenido quirúrgi
e lo
res, dim inu­
sa
Parasitol 1994; 49: 24-30.
mada por numerosos espacios irregula menudo dadas al perro doméstico. Experimentalmen­ Davis A, Pawlowski Zs, Dixon H. Multicentre clinical
n n un m mbr n h iali na con poco o
tos, que tie e a e a a
ag­ te el perro d?;fiéstico se h a comportado como hos­ trials of benzimidazolecarbamates in human echino-
está interrump ida por fr
Prevención sin líquido. Es ta masa P�?ero �efim'.ivo. El hombre p odría adquirir la infec-
an men tos de cutíc ula y está ro
deada de escaso tejido coccosis. Bull WHO 1986; 64: 383-8.
cas y c g a .. c1o n. al m�enr los huevos dé las deposiciones del
Las carac terísticas biológi a adventic ia y existe u na
D'Alessandro A, Ramírez LE, Chapadeiro E y cols. Second
ic s t
conjunti vo, sin form ar un
e oló
ce� ·c1ifi�i l ia a pli ­ hosp;d:ro definitivo, p ero és· probable que el perro
particulares de la hid;tidosis, ha para control ar y re ión infl am atoria con eosinófilos
. Cualquiera case ofhurnan infection by Echinococc11s oligartlm1s.
e prevenci ón nte una necro- domestico sea la fuente princip al de la infección Aro J Trop Med Hyg 1995; 52: 29-33.
cación de medidas d
acc
e u m ñ o , es frec uente que pr�se
empo.
erra dicar esta afección en corto ti
s a s ta a
i
354 PARASITOLOG/A MEDICA Capítulo 40

Deve F. L' Echinococcose primitive. París: Masson et Sapunar J, Parada M, Sapunar J (Jr) y cols. Quiste hida­ CISTICERCOSIS
Cíe, 1949. tídico abierto a vías biliares y bronquios. Bol Chil
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imagen en el estudio de la lesión focal hepática. Rev of mebendazole and albendazole. Ann Trop Med Definición. Es la infección producida por cisti­ multiceps cestodo productor de la cenurosis cere­
Esp Enf Digest 1995; 87: 379-81. Parasítol 1992; 86: 59-66. cercos. En relación con el hombre, es importante el bral humana (ver el Capítulo 44: Otros parásitos de
Gue� M, Arroyo A, Ubilla R. Quiste hidatídico hepáti­ Todorov T, Mechcov G, Vutova K y cols. Factors Cisticercus cellulosae, metacestodo o forma larval los tejidos); sin embargo, el cenuro bien desarrollado
co. Estudio ecotomográfico. Bol Chíl Parasitol 1990; influencing the response to chemotherapy in human de la Taenia solium, que normalmente infecta al contiene cientos de escólices y el cisticerco tiene un
45: 35-8. cystic echinococcosis. Bull WHO !992; 770: 347-58. cerdo, hospedero intermediario habitual, pero que escólex único y con las caracteristicas de la T. so/ium.
Ivanisevich O, Rivas CJ. Equinococcosis hidatídica. Bue­ Todorov T, Vutova K, Mechvoc y cols. Experience ín the también suele infectar al ser humano. Existe, además, una tercera variante morfológica
nos Aires. Editorial del autor, 1962. chemotherapy of severe, inoperable echinococcosís en algunos casos de neurocisticercosis humana, la
Meneghellí UG, Martinelli AL, Bellucci AD y cols. ín man. Infection 1992; 20: 19-24. Biología cual sería un estado de transición entre las formas
Polycystic hydatid disease (Echinococcus voge/i). Thompson RCA, Lymery AJ. Echinococcus and Hydatid quísticas y racemosas. Parecieran representar los
Treatment wíth albendazole. Am Trop Med Parasitol Dísease. U.K.. Cab International 1995. El huevo de Taenia solium ingerido por el cerdo estadios iniciales de la transformación de la tranquila
1992; 86: 151-6. Vildósola H, Sánchez L, Espínoza R. Albendazol en el o el hombre, una vez llegado al intestino libera a la y estática forma alveolar hacia el crecimiento de la
Pérez Fontana V. Archivos Internacionales de la hidati­ tratamiento de la hidatidosis hepática e intrabdominal. oncosfera o embrión hexacanto, el cual, gracias a sus activa forma racemosa. Estafomza intemzedia o de
dosis. Montevideo, Uruguay. (Publicación seriada en Rev Gastroenterol (Perú) 1989; 9: 17-23. ganchitos, se interna en la mucosa intestinal, penetra transición se caracteriza por su mayor tamaño y por
20 volúmenes aparecidos entre 1938 y 1972). Wilson JF, Rausch RL, Me Mahon BJ, Schantz PM. los vasos mesentéricos y se disemina por todos los presentar un escólex total o parcialmente evaginado
Rausch RL, D'Alessandro A, Rausch VR. Characteristics Parasiticidal effect ofchemotherapy in alveolar hydatid órganos. En los tejidos, la oncosfera sufre un proce­ claramente visible a ojo desnudo.
of the larval Echinococcus vogeli. Rausch and Berns­ disease: review of experience with mebendazole and so de vesiculización y en un período de dos a tres De este modo, el hombre se puede infectar con
tein, 1972, in the natural intermediate host, the paca, albendazole in Alaskan Eskímos. Clín Infect Dis 1992; meses se forma el cisticerco, metacestodo vesicular la Taenia solizim ya sea con sus cisticercos o con
Cunicu/us paca L. (Redentia: Dasyproctídae). Am J 15: 234-41. lleno de líquido, esférico, semejante a un grano de sus huevos. Si ingiere el cisticerco (Cysticercus
Trop Med Hyg 1981; 30: 1043-52. Wilson JF, Rausch RL. Wílson FR. Alveolar hydatid arroz, de 5 a 10 mm de diámetro, de paredes cellulosae), adquirirá la teniasis por el desarrollo en
Sapunar J, Gambiní L. Hidatidosis vertebral con pseu­ dísease. Review of the surgical experience in 42 ca­ translúcidas que dejan ver por transparencia un punto su intestino de la lombriz adulta, de la cual es su
doabsceso osífluente hidatídico extra e intrarraquídeo. ses of active disease among Alaskan Eskimos. Ann denso y blanquecino que corresponde al escólex hospedero definitivo (véase el Capítulo 21: Tenia­
Bol Chíl Parasitol 1993; 48: 18-25. Surg (United States) 1995; 221: 315-23. invaginado y provisto de cuatro ventosas y dos filas sis); si ingiere huevos, adquirirá la cisticercosis por
de ganchitos (Figura 40-1). Esta forma quística o la formación en sus tejidos de los cisticercos, cons.­
vesicular del cisticerco se observa en los tejidos del tituyéndose en un hospedero intermediario acciden-
cerdo y del hombre. Frecuentemente, está rodeado tal.
por una fina capa colágena que lo separa del tejido Por razones no bien establecidas, la ingestión
circundante; a la microcospia electrónica (ME), pre­ por parte del hombre de huevos de Taenia saginata
senta microvellosidades y una abertura por la cual el no produciría cisticercosis por Cysticercus bovis.
escólex se evagina.
Los cisticercos que se localizan en el cerebro del Epidemiología
hombre pueden presentar diversas morfologías. Las
más frecuentes son las formas quísticas o vesiculares Los mecanismos por los cuales el hombre puede
antes descritas. Pero en la neurocisticercosis se adquirir una cisticercosis son variados:
pueden observar las formas racemosas (como raci­ - Por ingestión de huevos de T. solium en ali­
mos), vesículas llenas de líquido, de mayor tamaño mentos o agua de bebida contaminadas con hec�s
(pudiendo medir 10 cm o más), redondeadas o alar­ humanas.
gadas, lobuladas, circundadas por una fina pared - Por medio de las manos de un portador de la
semejante a hollejos de uva. Macroscópicamente, lo teniasis que tenga malos hábitos higiénicos. Como
característico de la forma racemosa es la carencia de el huevo de T. solium es inmediatamente infectante,
escólex; sin embargo, por estudios histológicos se es muy fácil que se produzca la infección por el
pueden encontrar vestigios de este órgano. La au­ mecanismo ano-mano-boca.
sencia de escólex en la observación a ojo desnudo - Por vómitos de un portador de teniasis. La
de estos cisticercos que sólo se encontraban en el regurgitación de proglótidas grávidas hacia el estó­
cerebro del hombre, creó por muchos años una po­ mago, hace que el jugo gástrico digiera las paredes
lémica sobre 1a especie de cestodo a la cual pertene­ de los huevos, liberándose las oncosferas que darán
cía. Particularmente, es muv similar a Multiceps origen a la cisticercosis.
PARASITOLOGIA MEDICA CISTICERCOSIS 357
356"

porcinos en matanzas domiciliarias o en mataderos mente están asociadas con las fonnas clínicas de la
clandestinos, es posible que se expendan para el neurocisticercosis. Las formas benignas o asinto­
consµmo, cames infectadas con cisticercos, lo cual, máticas, generalmente están asociadas a la infec­
indirectamente, al infectar a nuevos hombres, au­ ción por ·cisticercos vesiculares, excepto cuando
mentará la contaminación fecal del suelo, cerrando provocan obstrucción de las cavidades ventricula­
el ciclo de transmisión. res del cerebro y provocan hipertensión endocra­
La cisticercosis constituye un importante pro­ neana. Por el contrario, las fom1as intermedias y
blema de salud pública por la gravedad de la enfer­ racemosas se encuentran en las graves neuro­
medad en el hombre y también económico, por los cisticercosis meningobasales. En estos casos, se
decomisos de animales parasitados. En América produce una severa y progresiva reacción infla­
Latina, las tasas de infección en autopsias varía en matoria por el contacto del parásito con las me­
distintos países entre 50 a 600 por cien mil habitan­ ninges, con obstrucción de la circulación del LCR
tes, cifras que suben alrededor de diez veces en e hipertensión endocraneana.
encuestas serológicas. La cisticercosis ocular se analiza en el Capítulo
46: Parasitosis oculares, y se destaca la gravedad
Patología de esta localización que corrientemente expone al
riesgo de la pérdida del órgano.
Desde el punto de vista patológico, los cisticer­ En resumen, el daño y la sintomatología de la
cos se comportan como pequeños tumores provo­ cisticercosis humana están condicionados por la
cando daño mecánico como tales (presión sobre los localización y por el número de parásitos, constitu­
tejidos, obstrucciones, etc.), a lo cual se debe agre­ yendo la neurocisticercosis y el compromiso ocular,
gar las manifestaciones asociadas a su condición las formas más graves y de peor pronóstico. Cual­
de elemento vivo íntimamente parasitando al hos- quiera sea su localización, los signos y síntomas de
pedero. la cisticercosis son los de un tumor que afecta al
En el hombre, los cisticercos se localizan más órgano parasitado.
frecuentemente en el tejido celular subcutáneo y
musculatura esquelética, pero obviamente son mu­ Diagnóstico
cho más importantes si se ubican a nivel del SNC
(neurocisticercosis) o de los ojos y sus anexos. Pero Son de utilidad los antecedentes de la proceden­
como la diseminación de las oncosferas se hace por cia rural del paciente y debe investigarse si él o
vía sanguínea, se pueden localizar en corazón, hí­ algún miembro de su grupo familiar es o ha sido
gado, pulmón y prácticamente en cualquier órgano. portador de una teniasis.
La neurocisticercosis se analiza in extenso en el Si los cisticercos están localizados en un sititi
Capítulo 45: ParasÍtosis del Sistema Nervioso Ce1_1- accesible del tejido subcutáneo, se los puede palpar
tral. Su trascendencia clínica y su pronóstico de­ bajo la piel como pequeños tumores de diámetro
penden de diversos factores: menor de l cm, siendo frecuente la necesidad de un
- La localización del parásito en el neuroeje: diagnóstico diferencial con lipomas u otros tumo­
serán más graves aquellas infecciones en que el res, mediante biopsias. También se les suele visua­
cisticerco se ubica en sitios vitales {por ejemplo, lizar mediante el examen de fondo de ojos.
cuarto ventriculo). El diagnóstico de la neurocisticcrcosis es com­
- El número de cisticercos. plejo, puesto que se trata de una entidad clínica que
- Si es de aspecto vesicular o racemoso, siendo no presenta síntomas y signos patognomónicos. Sin
Figura 40-1. Cvsticercus ce/111/osae. (A) Carne de cerdo masivamente infectada. (B) Corazón de cerdo con cisticercosis. estos últimos mucho más graves. duda, el mayor avance en el diagnóstico de la
caso
(C) Cisticerco; aislados, nótese el escólex. invaginado observado por transparencia. (D) Cisticerco ex.tirpado en un - El estado vital del parásito. neurocisticercosis ha sido el uso de diversas técni­
de cisticercosis ocular. En la neurocisticercosis, excepto los casos en cas por imágenes corno son la TAC y la RNM (ver
que existan signos y síntomas de compresión, pue-· el Capítulo 45: Parasitosis del Sistema Nen•ioso
ción del cerdo y del hombre. También influye la falta den pasar años sin que se produzcan molestias; sin Central); sin embargo, sus hallazgos no son de cer­
Habitualmente los pacientes son de procedencia
de diagnóstico y tratamiento precoz de la teniasis del embargo, cuando el parásito muere, aparecen o teza y además, no siempre son accesibles en los
rural, siendo más frecuente en los adultos jóvenes,
y pueden presentar el antecedente de haber tenido hombre, único hospedador definitivo de la T. soli11m, aumentan los síntomas, tal vez debido a que bajo países en desarrollo.
lo que facilitará la contaminación fecal del suelo y la estas circunstancias, se absorben fracciones proteicas Las principales pruebas serológicas utilizadas
o tener una teniasis.
diseminación de los huevos del parásito. que, por fenómenos toxialérgicos, pueden provocar en el diagnóstico de la cisticercosis son las reaccio­
La cisticercosis del cerdo y del hombre constitu­
En el ciclo de infección del binomio teniasis­ focos de reblandecimiento cerebral que afectan al nes de fijación del complemento (FC), la hemagluti­
yen un índice revelador del mal saneamiento am­
cisticercosis, la crianza deficiente del cerdo Y la encéfalo en regiones más extensas que las ocupadas nación indirecta (Hl), la contrainmunoelectrofore­
biental, puesto que la propagación de los huevos de
ausencia de una inspección médico-veterinaria en por el parásito. sis (CIEF), ELISA y la electroinmunotransferencia
T. solizÚn se efectúa por fecalismo. Una deficiente
los mataderos, contribuyen a la mantención de la Las tres fonnas morfológicas del cisticerco (quís­ o Western blot (EITB) (ver la Sexta Parte: Diagnós­
disposición de las escretas del hombre permitirá la
enzootia y de la endemia. Cuando se sacrifican tica o vesicular, intermedia y racemosa) habitual- tico de Laboratorio). En estas pruebas serológicas
contaminación fecal del suelo y favorecerá la infec-
358· PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 41
se emplean antígenos de C. cellulosae, obtenidos
mediante diversos procedimientos de extracción y
cercosis), se recomienda el uso simultáneo de corti­
coterapia.
ESQUISTOSOMOSIS
purificación.
Durante muchos años se emplearon los RFC y Prevención NAFTALEKATZyROBERTO SENAROCHA
RHAI, pero actualmente se han abandonado debido •­
a las enormes fluctuaciones de sus sensibilidades Se basa fundamentalmente en el diagnóstico y
(60 a 96%). El uso de ELISA, si bien aumentó la tratamiento precoz de la teniasis por T. solium del
sensibilidad entre 75 y 100%, presenta serias dificula hombre, para yugular la contaminación fecal del
· tades por la gran cantidad de reacciones. cruzadas suelo con los huevos de la lombriz y precaver la
(15%). Actualmente, el uso de HETB ofrece una infección del cerdo y del hombre. La educación para Definición. La esquistosomosis, también deno­ huevos. La hembra vive en el canal ginecóforo del
sensibilidad de 91 y 100% de especificidad. .la salud es de principal importancia y cuando se minada bilarziosis o bilarziasis, es causada en Amé­ macho; mide de 15 a 20 mm de largo por 1 mm de
Dé acuerdo coa estos antecedentes, es recomen­ tiene un paciente con cisticercosis, es aconsejable rica por el Sclzistosoma mansoni (Sambon, 1907). Se espesor, mientras que éste es más pequeño (10 a 15
dable utilizar técnicas serológicas de última genera­ extender la búsqueda de la parasitosis en otros miem­ trata de un helminto trematodo digenético de la fa­ mm) y más ancho (3 mm) (Figura 4 l-3A). El signifi­
ción como son ELISA o IETB en forma combinada, bros del grupo familiar. La prevención es similar a milia Schistosornatidae que parasita al hombre y otros cado del nombre Sclzistosoma es "cuerpo con hen­
para'aumentar la sensibilidad y asegurar la especifi­ las infecciones que se transmiten por fecalismo (ca­ vertebrados. didura" por el aspecto que presenta el macho con
cidad. En el caso de la neurocisticercosis, se debiera lidad del agua potable y de regadío, buena disposi­ su canal ginecóforo. Tanto el macho como la hem­
efectuar los exámenes serológicos en muestras de ción de excretas, eliminación adecuada de basuras Biología bra presentan dos ventosas, una- terminal y otra
sueros y LCR en forma conjunta, para aumentar el y control de vectores mecánicos), a lo que debe ventral.
rendimiento diagnóstico. agregarse la crianza higiénica de cerdos. De las seis éspecies de Sclzistosoma que parasi­ El macho presenta el tegumento con tubérculos,
tan al hombre (S. mansoni, S. japonicum, S. Jzae­ los cuales varian de aspecto en las diferentes espe­
Tratamiento matobium, S. intercalalllm, S. mattlzeei y S. me­ cies de Sclzistosoma. La hembra, luego de ser fecun­
BIBLIOGRAFIA kong¡), sólo S. mansoni es autóctona de las Améri­ dada, se dirige a los capilares y vénulas de la pared
Cuando se trata de uno o algunos pequeños cas y, por ello, será la única que será revisada en este intestinal, donde comienza la postura de huevos.
tumores de localización principalmente subcutánea Comité de Expertos. Informe de la reunión técnica sobre capitulo (Figura41-1). Cada hembra produce entre trescientos a mil huevos
y que habitualmente son detectados por el propio normalización y estrategias para la implementación Los huevos de S. mansoni son eliminados con diarios, los cuales son inmaduros y necesitan seis a
paciente, está indicada la remoción quirúrgica y el del inmunodiagnóstico de la cisticercosis humana. las heces del hombre y de otros animales (Figura siete días para transformarse en huevos viables y
respectivo estudio para lograr el diagnóstico preciso Buenos Aires, Argentina: CEPANZO, 1989: 15-19. 41-2). En contacto con el agua y bajo condiciones· maduros, los que constituyen el 95% de los huevos
entre la parasitosis y lipomas y otras tumoraciones. DíazJF, VirasteguiM, Gilman RH y cols. Inmunodiagnosis favorables de temperatura, luminosidad y salinidad, eliminados por las heces del hombre.
Pero, hasta hace algunos años, los casos de cisticer­ ofhuman cysticercosis (Taenia solium: A field com­ los huevos se rompen, dejando en libertad al mira­ Estos huevos con espícula lateral, contienen un
cosis generalizadas o de localizaciones tan vitales parison ofan antibody enzyme linked immunosorbent cidio. Esta larva ciliada, que tiene aproximadamente embrión y miden entre 112 a 174 µm de largo por 50
como en el SNC o en el ojo, no tenían tratamiento assay (ELISA), an antigen ELISA and enzyme-linked veinticuatro horas de vida libre, nada activamente a 70 µm de ancho (Figura 41-3). Muchos de ellos no
médico eficaz o requerian de cruentos procedimien­ immunoelectrotransferblot (EITB) assay in Perú. Am J en busca de su hospedero intermediario, un cara­ completan su ciclo y dan origen a diversos tipos de
tos quirúrgicos con pronósticos muchas veces per­ TropMedHy46: 610-5. col, al cual penetra por sus partes descubiertas, de huevos muertos. El estudio de los diferentes tipos de
turbadores. Por eso, el advenimiento de fármacos Escalante H. Evaluación de la electroinmunotransferencia preferencia las bases de las antenas o el pie. D�s­ huevos (ovograma), es decir, los inmaduros del pri­
capaces de destruir los cisticercos, constituyó un (EITB) coh antígenos de fluido vesicular de Cysticer­ pués de la penetración, el miracidio se transforma mero al cuatro estadio, inmaduros, muertos, maduros
avance terapéutico de tal magnitud que, inequívo­ cus cellu/osae para el diagnóstico de la cisticercosis en un esporoquiste primario. A partir del decimo­ muertos, granulomas y cáscaras, encontrados espe­
camente, se puede dividir la historia del tratamiento humana. Tesis para optar al grado de Magíster en cuarto día se forman los esporoquistes secunda­ cialmente en las paredes del intestino y en el hígado,
de la cisticercosis en dos etapas, la anterior y la Ciencias Biológicas con mención en Parasitología. rios, los cuales posteriormente migran para alojarse así como en las heces, sirven para evaluar el estado
posterior a la introducción del tratamiento medica­ ·Facultad de Medicina, Universidad de Chile. Santia­ en el hepatopáncreas o, menos frecuentemente, en de la infección esquistosómica y la evaluación tera­
mentoso. go, Chile, 1992. los ovotestes del molusco. En la glándula digestiva péutica de agentes esquistosomicidas.
Actualmente, el fármaco de primera línea en el García HH, Martinez M, Gilman R y cols. Diagnosis of sufren modificaciones acentuadas y se forman las
tratamiento de la cisticercosis, es el albendazol en cisticercosis in endemic regions. Lancet 1991; 338: cercarias de cola bifurcada (Figura 4 l-3B), las cua­ Epidemiología
dosis de 1O mg/kg/día durante 30 días que puede ser 549-51. les, por medio del estimulo de la luz y el calor, son
repetido varias veces con intervalos de descanso. El Rabela MT, Rivas A, Flisser A. Morphological types of eliminadas al agua. Las cercarias, que miden O, 14 En la actuafülad,-la esquistosomosis es endémica
prazicuantel es otro fármaco de utilidad en la cisti­ Taenia so/iwn. Panrsitology Today 1989; 5: 357-9. mm de largo por 0,04 mm de ancho, pueden sobre­ en setenta y cuatro países: el S. japonicum en tres
cercosis y fue el primero en usarse con éxito. Se Tsang VCW, Brand JA, Boyen AE. An Enzyme-linked vivir entre veinticuatro y cuarenta y ocho horas, y países (República Popular China, Indonesia y Filipi­
emplea en dosis de 50 m/k/dia, dividido en dos o Immunoelectrotransfer Blot Assay and Glycoprotein. al encontrar el hospedero definitivo, el hombre u nas); el S. Jzaematobium en cincuenta y dos países
tres tomas, durante 15 días y luego, después de antigens for diagnosing human cysticercosis (Taenia otros animales.vertebrados, lo penetran activamen­ deAfrica y del Mediterráneo oriental, y el S. mansoni
algunos intervalos, se puede repetir varias veces. so/ium).JlnfDis 1989; 159:50-9. te a través de la piel o de las mucosas. Durante la en cíncuenta y tres países que van desde la penín­
Por las reacciones de sensibilización que pudieran Wilson M, Bryan RT, Fried JA y cols. Clínica! evaluation penetración, pierden la cola y se transforman en sula· arábica hasta el continente americano.
desencadenarse por la masiva liberaci,ón de antíge­ ofthe cysticercosis by Enzyme-Linked lmmunoelec­ esquistosómulas. Por la circulación sanguínea, es- Se estima que hay un total de doscientos millo­
nos provenientes de los cisticercos que mueren (lo trotransfer Blot in patients with neurocysticercosis. J tas larvas llegan al corazón, pulmones e hígado, nes de personas parasitadas y que de éstas, 60
que es particularmente peligroso en la neurocisti- InfDis 1991; 164: 1007-9. para alojarse finalmente, a partir del trigésimo día, millones están infectadas por el S. mansoni, y entre
en las venas mesentéricas del sistema porta, donde 500 y 600 millones de personas se encuentran ex­
maduran sexualmente y comienzan la postura de puestas a la infección a causa de las condiciones de
360- PARAS/TOLOGIA MEDICA ESQUISTOSOMOS/S 361

Figura 41-1. Distribución de la esquistosomosis mansoni en las Américas.


Figura 41-2. Ciclo evolutivo y mecanismos de transmisión de Schistosoma mansoni.
pobreza, ignorancia, vivienda deficiente, malas prác­ Las poblaciones africanas inmigrantes habrían
ticas higiénicas y disponibilidad escasa o nula de estado infectadas por S. mansoni y/o por S. hae­
servicios sanitarios. matobium. Para la mantención de este último es B. glabra/a, la especie de caracol más suscepti­ B. lenagophila se encuentra en Brasil, en los
La explicación más aceptada para la aparición necesaria la presencia de caracoles del género Bu­ ble al S. mansoni, ocupa grandes extensiones del estados de Rio de Janeiro, Sao Paulo, Paraná, Santa
de la esquistosomosis en América es que fue traída linus, y para el primero, caracoles del género Biom­ Brasil: en el norte (Belém do Pará), en el Nordeste, Catarina, Rio Grande do Sul, al sur de Bahía, Minas
por los esclavos africanos. De hecho, pese a que se phalaria es muy extensa. Este género está represen­ en el Sudeste y en el Sur (Estado de Paraná). Tam­ Gerais, Goiás y Mato Grosso del Norte y del Sur.
han encontrado caracoles fósiles (datados de más de tado por más de veirtte especies en América, pero bién existe en la Guayana Francesa, Surinam y También es frecuente en Bolivia, Paraguay, Argen­
diez mil años), nunca se_ ha observado ·esquistoso­ son tres las principales especies que sirven como Venezuela. En las islas del. Caribe puede ser encon­ tina y Uruguay.
mosis entre las poblaciones humanas autóctonas, o hospederos intermediarios: B. glabra/a, B. lena­ trado en Santa Lucía, Guadalupe, Antigua, San Kitts, B. slraminea es la especie que presenta una mayor
en momias y coprolitos de este hemisferio. gophila y B. straminea. San Martín, Puerto Rico y República Dominicana. distribución, pues se extiende _desde Panamá hasta
362. PARASITOLOGJA MEDICA ESQUJSTOSOMOSIS 363

que el número de individuos infectados es de seis 100


a ocho millones en Brasil y de menos de doscien­
tos mil en los otros países americanos. 90 -1974

La expansión de la esquistosomosis amenaza 80 --- 1984


especialmente a las islas del Caribe, Argentina,
Paraguay y Uruguay. En Cuba, en los últimos años,
se han detectado millares de casos que se infectaron
recientemente en Africa. Como en este país existe
la presencia de B. havanensis y B. peregrina, es
posible que se complete el ciclo de la parasitosis.
Por este motivo, es muy importante la implementa­

-
ción de medidas de control para evitar la introduc­ 2
ción de esta enfermedad. , ,,.--"'"', '
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..
Los factores que favorecerían la instalación y/o 10

la diseminación de la parasitosis, son las migracio­ o


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nes (internas y externas), la construcción de siste­ e,
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mas de irrigación y de grandes reservas de agua, ó Ul ó


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falta de condiciones de saneamiento básico, ausen­
cia de agua potable y de alcantarillado, las faenas Figura 41-4. Prevalencia de la esquistosomosis mansoni
agrícolas, etcétera. en los diferentes grupos etarios de una población, antes
Existe una relación directamente proporcional y después de la terapia específica y de la aplicación de­
entre la prevalencia y la intensidad de la infección, n¡olusquicidas, en un área endémica de Brasil.
medida por el número de huevos de S. mansoni en
las heces de las poblaciones residentes en las zonas en que los niños se reinfectan hasta diez veces más
endémicas. La prevalencia encontrada en estas po­ que los adultos. Este fenómeno no depende sólo del
blaciones, muestra un crecimiento en los grupos comportamiento en relación con las aguas contami­
etarios a partir de los cinco años, alcanzando su nadas, en que el contacto de los grupos etarios jó­
máximo entre los diez y catorce o quince y diecinue­ venes puede ser mayor que en los grupos de mayor
ve años (Figura 41-4), lo que depende del grado de edad, sino que está también relacionada con el es­
infección en las comunidades, siendo más precoz en tado inmunitario de estos pacientes.
las áreas de mayor prevalencia. En los grupos de Si bien muchos animales ( especialmente roe­
más edad, la prevalencia es menor. dores silvestres), se han encontrado infectados por
No existe diferencia de infección por sexo, a no S. mansoni, pareciera tener poca importancia epi­
ser que se presenten por diferencia de comporta­ demiológica en la mantención de la esquistosoinosis
miento motivada por influencias culturales o profe­ en el continente.
sionales (por ejemplo, lavanderas, pescadores, etc.). En estudios sobre los atributos individuales rea­
Los principales focos son peridomiciliarios, lizados en Brasil, revelan que los índices de infec­
donde las personas contaminan los caracoles por ción por S. mansoni y los índices de esplenomegalia
medio de heces depositadas en lugares inadecua­ son significativamente más altos en los miembros
dos. de familias cuyos jefes de hogar son trabajadores no
La vida media del S. mansoni se ha calculado calificados, en las personas que no cuentan con
entre cinco y diez años en inmigrantes yemenitas de agua potable y en aquellos que residen en casas de
California, y de 3,3 años en individuos jóvenes de peor calidad.
Santa Lucía. En Puerto Rico se estima en ocho Se ha observado una urbanización cada vez
años, de acuerdo a exámenes coprológicos, en los mayor de la esquistosomosis, debido a que las con­
que no se ha encontrado disminución de la carga diciones socioeconómicas y sanitarias de las áreas
Figura 41-3. Diferentes estados de desarrollo de Sc/1istoso111a mansoni. (A) Gusanos macho y hembra. (B) Cercarla.
parasitaria; pero, en los individuos con infección circundantes de las grandes ciudades no son mejo­
(C) Huevo en lámina preparada por el método de sedimentación espontánea. (D, E) Huevos en diferentes estadios de
leve, la vida media de los gusanos fue estimada en res que las encontradas en iíreas rurales de muchos
desarrollo en mucosa intestinal de ratones experimentalmente infectados.
tres años. Sin embargo, se han relatado casos en los países de América Latina.
cuales la infección persistió por más de treinta años.
el norte de Argentina y al este de los Andes. Se La distribución de la esquistosomosis es menor Existen evidencias respecto a que los niños no ·Patología y sintomatologia
encuentra también en Paraguay, en ambas Guayanas que la de su hospedero intermediario. En efecto, la tienen inmunidad concomitante, pvesto que ellos
y en Surinam. En Brasil aparece desde el norte y esquistosomosis es endémica y se la encuentra en van adquiriendo nuevas cargas parasitarias en cada Diversas son las clasificaciones de las fases y
nordeste, alcanzando hasta los estados de Espíritu Brasil, Venezuela y Surinam; en el Catjbe, en Puer­ contacto con el parásito; en cambio, los adultos formas clínicas de la esquistosomosis mansoni. En
Santo, Minas Gerais, Goiás, Mato Grosso del Norte to Rico, República Dominicana, Antigua, Guadalu­ poseen este tipo de inmunidad. Una situación seme­ este capítulo adoptaremos la clasificación preconi­
y del Sur y Paraná. pe, Martinica, Montserrat y Santa Lucía. Se estima jante se observa después del tratamiento específico, zada durante el IV Congreso Brasileño de Hepato-
364 PARASITOLOGIA MEDICA ESQU/STOSOMOSIS 365

TABLA41-I que comparte epitopos de superficie del equisto­


sómula, es característico de la fase aguda. Recien­
ESQUISTOSOMOSIS: FORMAS ANATOMOCLINICAS
te1t1ente se ha demostrado que anticuerpos séricos

{
de la clase IgA contra SEA, antígeno soluble del
lnaparente
huevo, también se encuentran aumentados en la fase
FASE INICIAL: Fonnas: Aguda { lev� o. moderada aguda de la infección y se reducen dos meses des­
toxem1ca pués del tratamiento específico, correlacionándose
Intestinal con la gravedad de las manifestaciones clínico­
ultrasonográficas. El bazo se presenta como en un
Hepatointestinal
cuadro infeccioso agudo, es decir, con dilatación de
los senos y espesamientos de los cordones de Billroth.
compensada
Durante la fase aguda, los pacientes presentan a
descompensada la ultrasonografia, hepatoesplenomegalia y nódulos
Hepatoesplénica {
complicada (glomerulopatía, linfoma esplénico, linfáticos periportales aumentados en tamaño y en
trombosis portal) número. A pesar de que estos hallazgos sean ines­
pecíficos, puesto que también se pueden encontrar
en otras patologías como mononucleosis infecciosa,
FASE CRONICA: Fonnas: hipertensiva
Vasculopulmonar { hepatitis viral o sífilis, junto a los demás exámenes
cianótica son de gran utilidad en el diagnóstico de esta fase.
Las alteraciones radiológicas son principalmen­

{
pseudoneoplásica te micronodulaciones diseminadas en ambos pul­
Especiales ectópica mones y espesamiento bronquial. También se pue­
asociada den observar en la serosa peritoneal rnicronodula­
ciones (granulomas esquistosómicos), por medio
de la laparascopia.
La forma intestinal es la más frecuente y sus
logía· (1975), con pequeñas modificaciones (Tabla las zonas endémicas, como son: la fiebre tifoidea, signos y síntomas más comunes son la diarrea
41-1). kala-azar, salmonelosis, infecciones pulmonares, mucosa o mucosanguinolenta, alternándose o no
Después del contagio, representado por la pe­ malaria aguda, hepatitis viral, estrongiloidosis, et­ con constipación, tenesmo rectal, cólicos abdomi­ Figura 41-5. Aumento de volumen del hígado y del bazo
netración de la cercarla, el paciente adquiere la in­ cétera. nales, aerocolia, etc. Durante el examen fisico se en un niño con la fonna hepatoesplénica de la esquis­
fección, es decir, la fase inicial. Debe entenderse El cuadro clínico persiste, generalmente, duran­ advierte dolor a la palpación del trayecto cólico, tosomosis mansónica.
"fase" corno sinónimo de evolución en el tiempo; te una a tres semanas y tiende a desaparecer espon­ especialmente del sigrnoides. El hígado cuando se
la "forma" está caracterizada por la sintornatología táneamente: Sin embargo, puede evolucionar por encuentra aumentado, se palpa bajo el reborde cos­ la forma intestinal o hepatointestinal. El examen füii­
y las alteraciones tisulares. más tiempo e incluso llevar al paciente a la muerte, tal, lo cual caracteriza lafomza hepatointestinal (la co revela aumento especialmente del lóbulo izquier­
En la gran rnayoria de los casos, la fase inicial si no media un tratamiento adecuado. que se asemeja en todo lo demás a la forma intes­ do del hígado, palpable bajo el reborde costal, y se
en los moradores de zonas endémicas es i11apare11te Para el diagnóstico son muy importantes los tinal). En la mayoría de los casos es indoloro, de presenta duro y con nódulos. El bazo también crece,
o presenta una sintomatología frustra o benigna, lo antecedentes epidemiológicos, en los cuales el pa­ consistencia normal o ligeramente aumentado. pero no demasiado, lo que lo diferencia de la malaria
que hace muy dificil el diagnóstico, puesto que fre­ ciente relata haber frecuentado corrientes o aguas Los exámenes de laboratorio revelan un recuento o de la leishmaniosis visceral. En la forma hepatoes­
cuentemente es rotulada corno gripe, enteritis, etc. detenidas, y la presencia de sintomatología similar global de leucocitos normal, con discreta eosinofilia plénica descompensada, el paciente tiene hemateme­
Por otra parte, las personas que se ponen por prime­ en otras personas que tuvieron contactos con esas y pruebas de función hepática normales. El diag­ sis y/o melena, ascitis, y en el examen fisico se com­
ra vez en contacto con aguas contaminadas y que mismas colecciones hídricas. También los exáme­ nóstico de certeza se obtiene por el hallazgo de prueba muy comprometido el estado general, con
provienen de zonas donde la esquistosornosis no nes complementarios son muy indicativos. En efec­ huevos de S. mansoni en las heces, toda vez que la palidez, enflaquecimiento, abdomen globuloso, ba­
existe, pueden presentar una forma aguda leve, to, cuando el hemograma revela leucocitosis con sintomatología es dificil diferenciarla de otras pa­ ses toráxicas alargadas y presencia de circulación
moderada o toxémica. Algunos pacientes relatan eosinofilia acentuada, el diagnóstico está práctica­ rasitosis intestinales; si bien la presencia de sangre colateral.
escozor o dermatitis cercaria11a de duración fugaz, mente hecho. El examen parasitológico de las heces en las heces es más común en la esquistosomosis, Es común la aparición de hiperesplenismo, sín­
que se inicia a las pocas horas después del contacto va a revelar huevos de S. ma11soni a partir del cua­ de ningún modo es patognomónica de esta drome caracterizado por aumento de volumen del
con aguas contaminadas. En la primera y/o en la dragésimo día de infección. Finalmente, la pun­ parasitosis. La biopsia hepática o el examen bazo, citopenia periférica y médula normal o hiper­
segunda semana puede aparecer urticaria y edema ción-biopsia del hígado mostrará la presencia de anatomopatológico demuestra granulomas en las plásica. Los exámenes complementarios revelan
localizados, los cuales desaparecen espontáneamen­ granulomas esquistosómicos en su primera fase, es fases productivas y, en los casos más antiguos, en eosinofilia discreta y disminución de una o de todas
te. A partir de la quinta semana el estado del pa­ decir, la necrótico-exudativa (focos de necrosis ce­ fase de curación por fibrosis. las series de células de la sangre periférica.
ciente puede agravarse, al presentar diarrea mucosa lular e infiltrado de linfocitos y eosinófilos). La Laforma hepatoesplénica es consíderada como En los jóvenes con la forma hepatoesplénica
o mucosanguinolenta, fiebre elevada, anorexia, náu­ proliferación blastogénica de linfocitos in vitro, es sinónimo de gravedad y se caracteriza por el creci­ puede haber un grave compromiso del desarrollo
seas, vómitos, hepatoesplenomegalia dolorosa o no, más intensa cuando se estimula con antígeno de miento del hígado y del bazo (Figura 41-5). Se somático, acompañado de falta de caracteres sexua­
manifestaciones pulmonares y enflaquecimiento. huevo que puand_o_ se estimula con -antígeno del · puede presentar bajo tres formas: compensada, des­ les se.cundarios (infantilismo).
El diagnóstico diferencial de la forma aguda helminto adulto. La presencia de elevados niveles compensada y/o complicada. La forma hepatoesplé­ Desde el punto de vista anatomopatológico, lo
deberá hacerse con otras infecciones comunes en de anticuerpos IgM e IgG contra KLH, un antígeno nica compensada se asemeja en su sintomatología a que caracteriza a la forma hepatoesplénica es la
36-6 PARASITOLOGIA MEDICA ESQUISTOSOMOS!S

importante papel diagnóstico en la fibrosis de Sym­ nóstico se hace más sensible, práctico y rápido y de
mers, al revelar un cuadro típico constituido por bajo costo. Además, presenta la ventaja de poder ser
áreas más densamente ecogénicas a nivel de las cuantitativo y, por consiguiente, indicado para estu­
venas portales. dios epidemiológicos y para la evaluación terapéu­
El bazo en la forma hepatoesplénica se caracte­ tica. Un examen de heces por el método de Kato­
riza por su conformación conjuntivo-hiperplásica. Katz revela alrededor del 85% de los casos positivos
Las/armas vascu/opu/monares pueden tener su y una sensibilidad de cincuenta huevos por gramo
origen en la fase inicial (forma toxémica). En efec­ de heces. También se emplea comúnmente el méto­
to, algunos pacientes evolucionan hacia el cor pu/­ do de sedimentación espontánea en agua (Lutz 0
mona/e al cabo de pocos meses de haberse infecta­ Hoffman-Pons y Janer) y más raramente los de Stoll,
do. Sin embargo, lo más común es el compromiso Bell, etcétera.
pulmonar en la fase crónica, especialmente en la El método de eclosión de miracidios, muy usa­
forma hepatoesplénica. Esta forma puede presen­ dos para el diagnóstico de S. haematobiwn en orina,
tarse con o sin hipertensión pulmonar y cianosis. puede ser empleado como, método auxiliar para
En la hipertensión pulmonar, los pacientes tienen demostrar la viabilidad de los huevos de S. mansoni
disnea de esfuerzo, palpitaciones y tos. Al examen en las heces.
clínico, la hipersonoridad del segundo ruido en el En los últimos años, diversos estudios han de­
área pulmonar es muy sugestivo de este diagnósti­ mostrado el valor de la ultrasonografia en el diag­
co. El examen radiológico del tórax puede demos­ nóstico de las formas más graves de la esquisto­
trar alteraciones del arco medio, micronodulaciones, somosis, mientras que en las formas más leves, este
engrosamiento de las paredes bronquiales y aumen­ método tiene una baja especificidad.
to del corazón derecho. El estudio hemodinámico La biopsia rectal debe ser reservada para casos
muestra un aumento de la resistencia arteriolar con especiales donde, por ejemplo, existe una prueba
presión capilar normal. El cuadro anatomopatológico serológica positiva u otra fuerte sospecha diagnós­
revela arteritis pulmonar esquistosomósica. tica y, por lo menos, tres exámenes de heces nega­
La forma con cianosis se debe a microfistulas tivos. Con la aparición de nuevos métodos de exá­
arteriovenosas pulmonares. menes de heces se ha comprobado que los resulta­
Las/armas especiales pseudoneoplásicas, como dos obtenidos son semejantes, siendo el examen de
el propio nombre indica, semejan tumores, debido heces más fácil de realizar, sin ocasionar traumas
a su gran crecimiento. El estudio anatomopatológico fisicos y/o psíquicos en los pacientes.
revela una formación reactiva hiperplásica alrede­ La punción-biopsia del hígado debe reservarse
dor de los huevos de S. mansoni. para los casos en que se pretenda conocer el cuadro
Las formas ectópicas son las que aparecen en histológico, especialmente en el diagnóstic;o dife­
cualquier órgano o tejido de la circulación portal, rencial.
como, por ejemplo, en la piel, médula espinal, ce­ El diagnóstico inmunológico es, hasta el mo­
rebro, etc. Los huevos de S. mansoni se encuentran mento, sólo de presunción y no de certeza.
en prácticamente todos los tejidos y órganos del Durante muchos años se ha utilizado la intrader­
cuerpo humano. morreacción, con inyección de antígenos extraídos
Asociaciones mórbidas con la esquistosomosis de gusanos adultos, cercarías o huevos de S. ma11-
son comunes, presentándose concomitancia con soni. Pero en la actualidad, esta técnica debiera ser
salmonelosis y otras enterobacterias, y persistencia , abandonada por el gran número de falsos positivos
de antigenemia 'del virus de la hepatitis B, enmas­ y por la inyección de proteínas extrañas en los pa­
carando y confundiendo el cuadro clínico y cientes.
anatomopatológico. Otros ejemplos de estas formas Las reacciones serológicas a través de la búsque­
Figura 41-6. Esquistosomosis 111a11sónica. (A) Aspecto macroscópico del hígado en paciente esquistosomótico con asociadas son el compromiso renal, trombosis por­ da de anticuerpos específicos se han utilizado desde
fibrosis de Symmers. (B) Hallazgos histopatológicos en fragmentos de hígado obtenidos por punción biopsia, en tal, asociación con !infamas del bazo, etcétera. hace muchos años. Más recientemente las reaccio­
diferentes tiempos, en pacientes con la fonna aguda: (B-1) Granuloma en fase necrótica (3 meses); (B-2) Granu!oma nes preferidas son las técnicas de ELISA, inmuno­
en fase necrótico-exudativa (6 meses); (B-3) Granuloma fibrótico (1 año). (C) Fonna seudotumoral esquistosomótica: Diagnóstico fluorescencia y periovular. En un estudio multi­
aspecto macroscópico del yeyuno de un niño de 10 años de edad (Fotos A, B-1, B-2 y B-3, gentilmente cedidas por céntrico patrocinado por la Organización Mundial
el Prof. Persio Godoy, Brasil). El diagnóstico de certeza de la esquistosomosis de la Salud, quedó demostrado que los exámenes
es el parasitológico, es decir, el hallazgo de huevos serológicos actualmente existentes son equivalentes
fibrosis de Symmers (Figura 41-6). Se trata de una nica e intrahepática, por la esplenoportografia, ade­ de S. mansoni. Para este fin se utilizan el examen de entre sí.
peripiliflebitis granulomatosa crónica a nivel de los más de la presencia de várices esofágicas y/o várices heées, la eclosión de miracidios, la biopsia rectal o La biísqueda de antígenos en vez de anticuerpos
espacios porta del hígado, Esta .fibrosis se acompa­ rectales reveladas por la esofagoscopia y/o la la punción ·hepática. De éstos, ·el examen parasito­ abre una nueva e interesante perspectiva en el diag­
ña de hipertensión portal, la cual puede ser evalua­ rectosigmoidoscqpia. Más recientemente, la eco­ lógico de heces debe ser· el preferido. De hecho, nóstico de la esquistosomosis, ya sea para el diag­
da por la determinación de las presiones intraesplé- grafia, método no invasivo, ha pasado a tener un cuando se utiliza el método de Kato-Katz, el diag- nóstico o para la evaluación del tratamiento. Sin

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368 PARASITOLOG/A MEDICA ESQU/STOSOMOS/S 369

embargo, esta técnica todavía es poco sensible, lo oxamniquina; éstos son la cefalea, dolor abdomi­ curen, se sugiere el uso de otra droga esquistoso­ Sin embargo, el factor más importante fue la eleva­
que imposibilita su empleo rutinario. nal, diarrea y fiebre. En algunos casos se observan micida. ción del nivel socioeconómico, aumento en más de
reacciones urticariales. quince veces de la renta per cápita, lo que se ha
Tratamiento Estudios experimentales utilizando prazic_uan­ Prevención traducido en calles asfaltadas, agua potable, alcan­
tel marcado con carbono radioactivo revelan que tarillado e industrialización. Existe un estudio que
La terapéutica de la esquistosomosis se encuen­ después de la ingestión, la absorción es muy rápida Actualmente, el control de las esquistosomosis muestra que en áreas donde fueron aplicadas las
tra actualmente muy evolucionada. Con el adveni­ (entre treinta y sesenta minutos). Los principales debe abordarse desde dos puntos de vista: el control medidas de control específico, la prevalencia en el
miento de la oxamniquina y del prazicuantel, las inetabolitos del prazicuantel no presentan actividad de la transmisión y el control' de la enfermedad. El grupo de niños de seis años de edad cayó de 10-20%
drogas antes empleadas tales como el tártaro emé­ esquistosomicida. El prazicuantel en estudios in vitro control de la transmisión implica reducir la infec­ en 1953 a 0-16% en 1966. Si se compara con otra
tico, los derivados antimoniales, lucanthone, niri­ provoca contracción tetánica del S. mansoni (proba­ ción humana y del caracol a niveles tales, que per­ área, en la cual no se hizo ninguna medida especí­
dazol y el hycantone ya no son necesarias, por lo blemente por interferencia en el recambio de cationes mita interrumpir el ciclo evolutivo y evitar así la fica en este mismo periodo, la prevalencia bajó de
que no serán consideradas en este capítulo. Ca, Mg y K), después de diez segundos de contacto. transmisión de la parasitosis. El control de la enfer­ 6,0 a 1,2%. Esta reducción fue atribuida a las me­
La actividad de la oxamniquina (un derivado También se observa alteraciones del tegumento . medad significa reducir la morbilidad, tratando jores condiciones socioeconómica. A pesar de que
hidroxiquinolínico) en la esquistosomosis america­ (vacuolización) tanto in vitro como in vivo, entre especialmente - de interrumpir la aparición de las todavía hay transmisión en Puerto Rico, la
na es muy superior a la encontrada en Africa, donde los cinco y. quince minutos. La detención de la pos­ formas hepatoesplénicas. Para resolver este objeti­ morbilidad por la esquistosomosis prácticamente
son necesarias dosis tres a cuatro veces mayores tura de huevos es muy rápida. El prazicuantel es vo, _la quimioterapia parece tener la primera opción. ha desaparecido, siendo raros los casos de forma
para la obtención de buenos resultados en la infec­ activo contra todas las especies de Shistosoma que En efecto, después de los tratamientos con los hepatoesplénica.
ción por S. mansoni. En cambio, esta droga es in­ parasitan al hombre, además de presentar un am­ esquistosomicidas actualmente empleados, la pre­ En Venezuela la zona endémica está limitada a
activa para S. /zaematobium y para S. japonicum. plio espectro de acción contra otros helmintos. valencia de la enfermedad disminuye significativa­ las regiones Central y Norte, con presencia en el
. La oxamniquina en dosis de 15 mg por kilo de Los pacientes tratados con oxamniquina o pra­ mente y el cuadro clínico mejora con rapidez; inclu­ Distrito Federal y en los Estados de Miranda, Aragua,
peso corporal para adultos y 15 mg por kilo de peso zicuantel y no curados, presentan, sin embargo, una so con involución de los casos de la forma hepato­ Carabobo, Guárico y Maracay. En la década del 40,
para niños, en dosis única, por vía oral, produce una elevada disminución del número de huevos de S. esplénica inicial. También se ha demostrado que a cuando se inició el programa de control, la preva­
curación de 85 y 70%, respectivamente. Los efec­ mansoni en sus heces. Además, se ha observado _que pesar de la persistencia de las reinfecciones, la apa­ lencia en estas áreas era de aproxinladamente 14%
tos colaterales más comúnmente observados son cepas de parásitos aislados de pacientes tratados y rición de nuevos casos de forma hepatoesplénica y en algunas localidades llegaba al 70%. Al co­
cefalea, temblores, somnolencia y náuseas. Ge­ no curados, se mostraron resistentes a la oxamni­ disminuye considerablemente. mienzo, el control, principalmente, se centró en la
neralmente son pasajeros, duran menos de veinti­ quina en animales de laboratorio. Sin embargo, la mantención de estos buenos erradicación del hospedero intermediario (B. gla­
cuatro i1oras y no necesitan ningún cuidado espe­ Recientemente, se han observado bajos índices resultados iniciales es dificil, puesto que son nece­ bra/a) por medio de la remoción de la vegetación,
cial. Alrededor del 0,5% de los pacientes tratados de curación con prazicuantel en pacientes del sarios tratamientos repetidos, los cuales, si no son mejoria del sistema de drenaje y aplicación de
con oxamniquina presenta alucinaciones, excitación Senegal. Animales de laboratorio infectados con S. realizados, permiten que los índices de prevalencia molusquicidas. Posteriormente se introdujeron me­
psíquica y/o convulsiones. Por estos efectos se­ mansoni aislados de pacientes de Senegal y tratados aumenten nuevamente, sobre todo en los grupos didas de saneamiento y quimioterapia. Los resulta­
cundarios, la oxamniquina debe ser preferentemen­ con prazicuantel, demostraron ser poco suscepti­ jóvenes, que son más susceptibles para desarrollar dos de este progama fueron muy buenos, con una
te administrada después de comida y con el pacien­ bles a esta droga, al compararlos con helmintos la forma hepatoesplénica. reducción del área endémica de 14% en 1950, a
te en reposo en cama hasta el día siguiente. En el aislados de Puerto Rico y Kenya. Estos hallazgos En Brasil se está realizando desde 1976 un pro­ 2,2% en 1971 y menos de 1% en la década del 80.
hombre la oxamniquina es rápidamente absorbida nos llevan a pensar que los pacientes del Senegal grama de tratamiento a gran escala de la esquis­ En Surinam, cuya caracteristica es la multipli­
por vía oral, alcanzando su máxima concentración son capaces de tolerar el prazicuantel. tosomosis en varios Estados del nordeste. Con más cidad étnica (con negros, mulatos, javaneses, in­
sanguínea entre los treinta y los ciento ochenta Es inlportante referirse al efecto del tratamiento de doce millones de tratamientos aplicados, ha sido dios, indonesios, amerindios, chinos, europeos y
minutos. También su eliminación es rápida y no se clínico sobre la evolución de las formas graves. la quimioterapia la principal arma utilizada, reci­ otros), la esquistosomosis ocupa una región de 1.200
le encuentra en la sangre veinticuatro horas des­ Cuando los niños y adultos jóvenes son tratados y se biendo menor atención el combate al caracol, el km, es decir, el O, 75% de toda el área del país. La
pués de la ingestión. Su metabolización es hepática reinfectan, la aparición de formas hepatoesplénicas saneamiento básico y la educación sanitaria. Eva­ región endémica comprende la capital y regiones
y su eliminación es principalmente por vía renal. es significativamente menor que en los no tratados. luaciones parciales han demostrado que se ha pro­ vecinas, así como áreas de la costa. Las aguas, por
Experimentalmente se ha comprobado que los Por otra parte, el tratamiento clínico hace que las ducido una disminución de la prevalencia en la ser ácidas, limitan el desarrollo de los caracoles. Se
machos de S. mansoni son más sensibles a la acción formas hepatoesplénicas iniciales sufran una invo­ mayoria de las localidades tratadas. estima que aproximadamente diez mil casos (me­
de la oxamniquina. La droga produce edema y ne­ lución, observándose la desaparición del aumento Estudios preliminares indican una acentuada nos del 3% de la población), estaban infectados y
crosis del tegumento, con posterior aparición de de volumen del hígado y/o del bazo en muchos disminución en la frecuencia de formas hepatoesplé­ hace más de diez años que se está efectuando el
lesiones bulosas. Los vermes son llevados hasta el pacientes. En aquellos en los cuales la forma hepa­ nicas en dos Estados brasileños. En uno, el trata­ tratamiento clínico y aplicación de molusquicidas.
hígado donde serán fagocitados. La postura de hue­ toesplénica ya está totalmente instalada con hiper­ miento en masa fue utilizado varias veces y, en el En la isla Santa Lucía, del Caribe, se instaló un
vos se interrumpe a partir del tercer día. El modo de tensión portal presente, el tratamiento quirúrgico otro, todavía no se había implantado el Programa de progrania de control en 1965. Fueron implantadas
acción de la droga parece estar relacionado con el puede ser imperativo (descompresión del sistema Esquistosomosis. Sin embargo, debe destacarse que de una manera científica, varias medidas de control
sistema neuromuscular del parásito; sin embargo, portal). un gran número de personas fueron tratadas o se que aisladas o asociadas, proporcionaron valiosos
hasta el presente se desconoce el mecanismo íntimo Para el control del tratamiento, deben efectuarse automedicaron allí en los últimos veinte años. conocimientos. La prevalencia cayó mucho en áreas
de su acción. seis exámenes parasitológicos de heces (método En Puerto Rico, la esquistosomosis ha presen­ endémicas; en el Valle de Marquis, por ejemplo,
El prazicuantel, un derivado pirazinoisoquino­ Kato-Katz), realizados entre el cuatro al sexto mes tado una acentuada disminución de la prevalencia, donde se hizo tratamiento clínico, disminuyó de
linico, en dosis de 50 mg por kilo de peso para después de la terapia. incidencia y morbilidad en los últimos treinta y 18,8 a 4,1% en el grupo etario de uno a diez años
adultos y de 65 mg por kilo-de peso para niños, en Los pacientes no curados pueden ser sometidos cinco años. Las actividades de control se iniciaron de edad. En el Valle de Riche Fond, donde fue
dosis única, por vía oral, proporciona un porcentaje a un segundo tratamiento con la misma droga an­ en 1953, co� aplicación de molusquicidas, trata­ instalada agua potable en· las casas, la incidencia ·
de curación y de efectos colaterales semejantes a la teriormente usada. En el caso que nuevamente no se miento clínico, control biológico y saneamiento. cayó de 31 a 12%; sin embargo, la prevalencia se ha
370- PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 42
mantenido durante cinco años. En 1981, cuando el
proyecto concluyó, el riesgo de contrae: la infección
Coutinho A. A new dynamic approach to the diagnosis of
Symmer's fibrosis in schistosomiasis by ultrasound. PARAGONIMOSIS
fue considerado mínimo y la prevalencia era menos Rev Inst Med Trop Siio Paulo 1990; 32: 73-7.
de 2%. A partir de entonces, la responsabilidad del Falcan PG,Tao LF, Ismail MM, Bennett JL. Schistosome CESARNAQUJRA
control se entregó al gobierno de Santa Lucía. Da­ resistence to praziquantel: factor artifact? Pa_rasitology
tos sobre la situación actual de la esquistosomosis Today 1996; 12: 316-20.
en esa área todavía no se han divulgado. Informe de un Comité de Expertos de la Organización
Es inte;esante resaltar que la esquistosomosis Mundial de la Salud. OMS Serie de Informes Técnia
no ha sido transmitida desde 1962 en la isla de cos 1985; 728: 1-126.
Viegues, después de la aplicación de molus�uicid�s Jonge N. Immunodiagnosis of Schistosoma infections by Definición. La paragonimosis es una zoonosis también en el hombre los huevos pasan al tubo
y de tratamiento clínico, a pesar de la persistencia detection of the circulating anodic antigen. Leiden. parasitaria causada por trematodos del género Pa­ digestivo y son elímínados con las deposiciones.
de B. glabra/a. También se ha registrado la desapa­ Universidad de Leiden 1990; 218. ragonimus. Los huevos son de 60-80 mm de largo por 50-60 mm
rición de la esquistosomosis en las islas de St. Mar­ Katz N, Cháves A, Pellegrino JA. Simple devíce for quan­ En América Latina, el parásito adulto suele ubi­ de ancho, ovalados, operculados; se puede obser­
tín y St. Kitts debido a modificaciones hidrológica�. titative stool thick.smear technique in Schistosomiasis carse en el pulmón de mamíferos pequeños o acci­ var que la cáscara del huevo no es lisa, sino presenta
Si bien el énfasis actual del control de la morbi­ mansoni. Rev lnstMedTrop Síio Paulo 1972;14: 397- dentalmente en el hombre, y los dos estadios'Jarva­ depresiones y elevaciones, dándole aspecto ondu­
lidad está centrado en la quimioterapia, el objetivo 402. rios en caracoles y cangrejos, respectivamente. En el lado.
principal será siempre la mejoría de las condiciones Paraense WL. Estado actual da sistemática dos Planor­ hombre, el diagnóstico clínico suele confundirse, El ciclo evolutivo continúa cuando estos hue­
de vida de las poblaciones residentes en zonas en­ bideos Brasileíros. Arq Musen Nac (Rio de Jarieiro) más comúnmente, con tuberculosis pulmonar, ya vos, en el medio ambiente deben encontrar coleccio­
démicas, puesto que sólo así los resultados de los 1975;55: 205-28. que el esputo hemoptoico es el signo clínico más nes de agua dulce para continuar su desarrollo (Fi­
programas de control serán duraderos y totalmente Pellegrino J, Katz N. Experimental chemoterapy ofSchis­ relevante. gura 42-2). En el interior del huevo se desarrolla un
eficientes. tosomiasis mansoni. En: Daves B. ed.: Advances in embrión o miracidio que emerge, levantando el opér­
Parasitology. (New York) Academic Press !ne 1968; Biología culo, al completar su maduración, en busca de cara­
223-90. coles. Estos caracoles son pequeños, pulmonados.
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metodologías.
El adulto, en la mayoría de especies de Para­
gonimus es un gusano ovalado, de 8 a 15 mm de
largo por 4-5 mm de ancho, vesiculoso, de color
rosado, parecido a un grano de café. Presenta dos
ventosas, la anterior u oral y la ventral o acetabulum
que tiene fondo ciego y le servirá sólo para la fija­
ción. La superficie del parásito está provista de es­
pinas características para cada especie. Es hermafro­
dita y el tubo digestivo sinuoso cursa desde la ex­
tremidad anterior a los lados del gusano, terminando
en fondo ciego (Figura 42-1).
El adulto se localiza en cavidades, en pleno pa­
:¡ rénquima pulmonar. Estas cavidades suelen comuni­
carse con los bronquios; de manera que los huevos
puestos por el parásito alcanzan las vías respirato­
:\ rias altas. En el caso del hombre, ellos son eliminados Figul'll 4:Z-1. Microscopia de barrido de la superficie

j.
con el esputo al exterior,· pero en los animales y ventral de una metacercaria de Paragonimus pen1vianus
. con sus ventosas oral y ventral.
.
PARAS/TOLOGIA MEDICA PARAGONIMOSIS 373
372

Pulmones Patología

, ,Adµlto� La metacercaria al atravesar la pared del tubo


digestivo ?casiona una cavidad casi microscópica,
que se extiende por el grosor de la pared, y ocasiona
hemorragia. La lesión es tan pequeña que no suele
ser detectable y aparentamente no ocasiona molestia
alguna. Si lo observado en la infección experimental
del gato, ocurre en el hombre, ·1a penetración en la
(e) )'R�f�#V pared del tubo digestivo sería desde el esófago.
. Jii:ii�;pn�s La metacercaria o forma juvenil del parásito al­
canza desde el esófago a la musculatura de los
espacios intercostales, y allí adquiere mayor desa­
HOMBRE, rrollo. Esta forma juvenil atraviesa la pleura y se
MAMIFEROS SILVESTRES Y DOMESTICOS Heces/ esputos Figura 42-3. Caracoles Aroapyrgus co/ombiensis, pri­ aloja en el tejido pulmonar donde alcanza su esta­
INGESTION meros hospederos intermediarios de la paragonimosis en dio adulto, formándose una cavidad alrededor de
AMBIENTE ACUATICO Centro y Sudamérica. él, cuyas paredes están constituidas por tejido
granulomatoso, condensación parenquimal y des­
trucción de los alvéolos. La destrucción del tejido
pecari (Tayassu pecan), etc., animales domésticos, pulmonar permite la conexión de la cavidad que
como el gato (Fe/is domesticus), que ha demostrado contiene el parásito con bronquiolos o bronquios.
(d) ser un buen animal de experimentación; también El adulto maduro coloca sus huevos alrededor del
deben encontrarse los hospederos intermediarios, parásito, muchos de ellos alcanzan los bronquios o
(e) los primeros son caracoles pequeños, la mayoría bronquiolos y salen al exterior con el esputo y otros
pertenece a la especie Aroapyrgus colombiensis, y quedan atrapados en el tejido pulmonar inflamado,
los segundos son cangrejos de los géneros Hypolo­ formándose alrededor de ellos un tejido granulo­
bocera o Pse11dothelph11sa; sin embargo, se consi­ matoso rico en células mononucleares y tejido fi­
dera que los camarones podrían ser hospederos in­ broso. Estas lesiones explican la sintomatología de
termediarios importantes. Los focos endémicos ocu­ los pacientes.
rren en regiones restrictas, rurales o silvestres, mu­ En las localizaciones cerebrales del parásito adul­
Figura 42-2. Ciclo evolutivo de Paragonimus spp. Los helmintos adultos tienen su hábitat en el pulmón (a) y desde chos de los cuales se conocen en forma incompleta. to, observadas en pacientes del Asia, conlleva11 a
allí elimina huevos que salen al exterior por el esputo y/o por las heces (b). En agua dulce, del huevo emerge el Entre los países latinoamericanos en los que se lesiones inflamatorias o formaciones de granulornas
miracidio que busca a los caracoles (primer hospedero intermediario), en los cuales se desarrollarán esporoquistes y redias ha demostrado la presencia de paragonimosis están: cerebrales. Más raro son otras localizaciones eé:­
(c). Las cercarías resultantes abandonan el caracol y penetran a cangrejos y camarones (segundos hospe�eros interme­ México, Panamá, Ecuador, Costa Rica, Guatemala, tópicas.
diarios), y se forman las metacercarias (d). La ingestión de estos cangrejos y camarones con metacercanas provoca la Honduras, Perú, El Salvador, Colombia.
infección de los hospederos definitivos (hombre y pequeños mamíferos silvestres o domésticos como el gato), Y se Sintomatología
desarrollan las formas juveniles del parásito, las que luego de madurar, migran al pulmón (e).
La sintomatología está relacionada al número de
parásitos presentes en el pulmón, a la reacción
En el caracol, primer hospedero intermediario, se animal o humano, permite el ingreso de la metacerca­ inflamatoria, y a la extensión de las cavidades forma­
desarrollará el esporoquiste, luego las redias de las ria. En el caso de P. mexican11s y/o pentvianus, la das y conectadas con el exterior.
que emergerán las cercarias. Las cercarias son ele­ metacercaria atraviesa la pared de las partes altas del El período invasivo del parásito suele pasar des­
mentos alargados que presentan acetabulum, vento­ tubo digestivo y se traslada a los músculos apercibido; en cambio, el período de estado, corres­
sa oral y suele observarse un estilete y cola; son intercostales y luego de un período de aparente pondiente a la presencia del parásito en el pulmón,
activas, abandonan al caracol y van a penetrar al maduración, migran al parénquima pulmonar donde suele dar escasa sintomatología, por lo cual, la con­
cangrejo, el segundo hospedero intermediario, don­ harán sus cavidades. currencia del paciente a un centro de salud suele
de adquieren el estadio de metacercaria. En hacerse sólo cuando tiene tos persistente y en algún
Latinoamérica, las especies más comunes de cangre­ Epidemiología momento, cuando la expectoración es sanguinolen­
jo encontrados infectados pertenecen a los géneros ta. El paciente suele tener un buen estado general,
Hypolobocera y Pse11dothelph11sa (Figura 42-4). En La paragonimosis se presenta como focos endé­ incluso es raro que haya fiebre, lo que lo diferencia
el caso de P. westermani, dicha metacercaria se micos en diversos países de Latinoamérica, consti­ de la sintomatología de la tuberculosis. Dada la alta
enquista, y en los Paragonimus observados en tuyendo problemas de salud regionales en esos paí­ incidencia de tuberculosis pulmonar en las zonas
Latinoamérica, ella se halla libre en el hepatopáncreas ses. En dichos focos están presentes los elementos endémicas de paragonimosis, hay la tendencia de
o musculatura del cangrejo. . .. . de la cadi;na epidemiológica: los.�qspederos defini­ Figura 42-4. Cangrejo Hypo/obocera que junto a can­ considerar a toda persona con expectoración
La ingesta del cangrejo infectado, crudo o insu­ tivos, que suelen ser mamíferos silvestres, peque­ grejos Pseudothelphusa, constituyen los segundos hospe­ hemoptoica como tuberculosa, hasta que no se de­
ficientemente cocido, por el hospedero definitivo, ños, como la hurón (Didelphis azarae pemigra), el deros intermediarios de paragonimosis en Sudamérica. muestre lo contrario. Estos pacientes de parago-
374_ PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 43

nimosis son diagnosticados clínicamente como tu­


berculosos y tratados como tales durante largo tiem­
Prevención FASCIOLOSIS
po, hasta que, por un mejor estudio radiológico o El no ingerir cangrejos crudos o insuficiente­
con otros exámenes se llega a su verdadero diagnós­ mente cocidos evita el principal mecanismo de trans­ ANTONIO ATIAS
tico. misión del parásito; sin embargo, es importante
En Asia, suele haber localización de los adultos señalar la presencia de hospederos paraténicos de
de Paragonimus en el cerebro, produciendo cuadros las metacercarias, que pueden tener importancia
neurológicos variados, desde convulsiones, hasta ·epidemiológica. La presencia de estos hospederos
encefalopatías graves. han sido demostrados en Latinoamérica y Asia. En­
Perú se ha demostrado, experimentalmente, que el Definición. Zoonosis parasitaria producida por Biología
Diagnóstico cobayo, alimento popular de las zonas endémicas, un trematodo, la Fasciola hepatica (distoma del
es un hospedero paraténico, en el que el parásito hígado), en cuyo ciclo intervienen como hospederos La Fasciola hepatica, vulgarmente conocido
Se sospecha paragonimosis cuando a estos pa­ sólo se encuentra en estado juvenil y no alcanza el definitivos los animales herbívoros y el hombre y, como "pirihuín" en Chile, o "saguaipé" en el sur de
cientes, erróneamente calificados de tuberculosos, estado adulto. como hospedero intermediario, un pequeño caracol Argentina, es un trematodo digenético, con el aspec­
no se les encuentra el bacilo de Koch en el esputo, de agua dulce. En el hombre la migración del parásito to de una hoja lanceolada, con un cono cefálico bien
a pesar de todos los métodos usados para este pro­ y su ulterior localización en las vías biliares determi­ diferenciado (Figura 43-1). Mide de 2 a 3 cm de
pósito. El antecedente de procedencia de zona endé­ REFERENCIAS na un cuadro clínico caracterizado por un estado de longitud y de 1 a 1,5 cm de ancho y es de color café
mica y el hábito de ingerir cangrejos insuficiente­ hipersensibilidad y síntomas hepatobiliares. blanquecino; su tegumento está constituido por una
mente cocidos, suele establecer la sospecha de la Amunárriz M. Paragonimiasis en la Región Amazónica Sinonimia: distomatosis hepática. capa citoplasmática continua, sin límites celulares, y
parasitosis. Ecuatoriana. Publicación de la Prefectura Apostólica cuyos núcleos se encuentran por debajo de la capa
El estudio radiológico muestra lesiones infil­ de Aguarico Nº 9. Í984. muscular superficial. La superficie del tegumento
trativas o en casos más definidos, cavidades peque­ Amunarriz M. Infestación natural de Aroapyrg11s co/11111- está solevantada por numerosas espinas. Posee dos
ñas o en raros casos, grandes, que asemejan a un biensis por redias y cercarías de Parago11i11111s 111exi­ ventosas musculares, una anterior peribucal y otra
panal de abejas; estas imágenes suelen observarse conus (P. per11vianus) en la región amazónica ecuato­ ventral o acetábulo. Es hermafrodita y sus órganos
con más frecuencia en las bases de los pulmones o riana. Publicación del Vicariato Apostólico de Agua­ sexuales están en la porción central del parásito.
en el tercio medio, Jo cual establece algunas dife­ rico Nº 12. 1986. Presenta un intestino muy ramificado que termina
rencias ·radiológicas con la tuberculosis pulmonar. Johnson R, Jong E, Dunning S y cols. Paragonimiasis: en dos ciegos.
Los exámenes de laboratorio incluyen la bús­ Diagnosis and the use of praziquantel in treatment. Rev El parásito adulto se localiza en las vías biliares
queda de huevos de Paragonimus en el esputo y en Infec Dis 1985; 7: 200-6. del ganado ovino, bovino o porcino y, accidental­
las heces, ya que, por deglución, ellos pueden pasar Malek E, Ibáñez N, Guerra A. Description of redia and mente, en el hombre. Se desplaza mediante movi­
al tuvo digestivo. Se aconseja que el esputo sea la cercaría ofParagonimusperuvianus from experimen­ mientos replantes y coloca apenas algunos centena­
colección de 24 horas y, luego, utilizar, tanto en el tally infected Aroapyrg11s co/o111biensis of Conde­ res de huevos (Figura 43-2 y Lámina 34) los cuales
examen de heces, como en el del esputo, el método bamba valley, Perú. J Parasit 1985; 71: 253-6. son de forma elíptica, de alrededor de 150 µm en su
de la sedimentación rápida, similar al usado en el Paulin J, Naquira C, Tantalean M. Scanning and trans­ diámetro mayor, de color pardo amarillento, debido
diagnóstico de Fasciola hepatica. mission electron microscopy of the tegument of the a que están impregnados por pigmentos biliares, y
Las pruebas inmunológicas más empleadas son metacercarie of Paragoni111us peruvian11s. Parasitol. con un opérculo visible en uno de sus polos. Los
la intradermorreacción y las pruebas serológicas. al Día 1993; 17: 5-1'0. huevos llegan por la bilis al intestino y, desde allí, al
La intradermorreacción consiste en la utilización Tantalean M, Huiza A. La ruta migratoria de la larva de exterior, con las heces del hospedero.
de antígeno preparado a partir de adultos del pará­ Parago11i11111s 111exicanus Miyazaki e !shii, 1969 en el Sólo continúan su desarrollo aquellos huevos que
sito. Se ha demostrado reacciones cruzadas entre gato doméstico infectado experimentalmente. Revis­ caen al agua de vertientes o de acequias con escasas
los antígenos de diversas especies de Paragonimus, ta de Ciencias UNMSM 1986; 74: 63-9. sustancias orgánicas en descomposición (Figura
por lo que se suele emplear el antígeno de P. Tantalean M Huiza A. Parago11i11111s y paragonimiasis en 43-3). Según la temperatura (las más favorables os­
westermani. Las pruebas serológicas más usadas el Perú. Bol Med Trop (Lima) 1986; 5: 33-6 y 5: 72- cilan entré 1Oº y· 30 ºC), en un plazo de dos a tres
son la Fijación del complemento, ELISA, lnmuno­ 80. semanas, los huevos dan origen a un primer estado
electroforesis e Inmunodifusión. Urteaga O, Ibáñez N, Miranda H. Paragonimiasis. IV larval, el miracidio, de aspecto ovalado y recubierto
Aspectos histopatolt\gicos en animales reservorios.
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La droga de elección es el prazicuantel a la dosis Kustenkordillere von Ecuador: Paragonimus ecua­
de 25-75 mg/kg de peso durante 2-4 días. En el doriensis n. sp. (Paragonimidae; Trematoda). Tropen­
pasado, se utilizó el bithionol con buen resultado, med Parasit 1979; 30: 249-63.
pero por las dosis altas y los efectos colaterales, así
como el tiempo prolongado de su uso, es superado
con ventaja por el prazicuantel. Figura 43-1. Ejemplar adulto de F. hepatica. Se observa
·
.·: :..'. ��·te· �·· , ... � su aspecto foliáceo, su cono cefálico, las ventosas y el
aparato genital. Figura 43-2. Huevos de F. hepatica.
376.. PARASITOLOGIA MEDICA FASCIOLOSIS 377

Vía Biliar deyecciones los charcos y las acequias que encuen­


'.'iduitJf;
,·,·>:· '.Vi··-·:::.•·
tra en su camino; se inicia así la infección del ca­
racol, con la ulterior contaminación del pasto con
las metacercarias, las cuales serán fuente de infec­
ción o de sobreinfección al regreso de los animales
en la próxima primavera.
El hombre se infecta al ingerir las metacercarias
contenidas en el berro crudo. Este antecedente se
detecta en 90-95% de los casos. Naturalmente, la
infección del hombre no es tan frecuente ni tan
grave, puesto que las oportunidades de ingerir me­
, Intestino (b) tacercarias son mucho menores que las de los ani­
"-'C::...:..."""'"-'-'-" males.
HOMBRE Y OTROS HERBIVOROS Figura 43-4. Caracoles del género Li11111aea hospedero
La fasciolosis puede presentarse corno una epi­
INGESTION intennediario de F. hepatica.
demia familiar; por ello, se debe extender la inves­
tigación de la infección al grupo humano con el
AMBIENTE ACUATICO cual vive el caso índice. En Chile, Cuba y Francia
o.fficina/e), al ser ingerida por los animales o por el se han descrito importantes brotes epidémicos fa­
hombre, continúa su desarrollo en el tubo digestivo, miliares de esta parasitosis.
en donde se disuelve su envoltura y queda libre la
forma juvenil. Este distoma joven atraviesa la pared Patología
(d) intestinal y, tres horas después, se encuentra en la
cavidad peritoneal. Permanece allí de tres a quince Se conoce como período de invasión, el com­
días, avanzando por el peritoneo hasta llegar a la prendido entre la ingestión de las metacercarias y la
(e) cápsula de Glisson, a la que perrora para penetrar llegada de los distomas jóvenes a los conductos
en el hígado. Migra a través del parénquima hepá­ biliares. El período de estado comienza con la
tico y se localiza en los conductos biliares, donde parasitación de la vía biliar provocada por los gusa­
alcanza el estado adulto unos dos meses después de nos adultos. La patología producida es distinta en
la infección. cada uno de estos períodos.
En forma experimental, se ha demostrado, du­
Epidemiología rante el período de invasión, una inflamación peri­
toneal con exudación de una cantidad variable de
Figura 43-3. Ciclo evolutivo de Fasciala hepatica. Los he]IJ1intos adultos tienen su hábitat en la vía biliar de herbívoros La fasciolosis es una importante zoonosis para­ líquido seroh'ernático; además, se evidencia edern·a
y del hombre (a) y desde allí elimina huevos al intestino, los cuales salen al exterior por las heces (b). En agua dulce, sitaria común en ovejas y en vacunos, aunque tam­ del epiplón mayor y adherencias laxas al diafragma
del huevo emerge el miracidio que nada buscando a los caracoles (hospederos intennediarios), en los cuales se desarrollarán bién se pueden infectar cabras, cerdos y caballos. y a los órganos vecinos. La cápsula de Glisson pre­
los esporoquistes y las redias madres e hijas (c). Las cercarías resultantes abandonan el caracol y se enquistan como En Latinoamérica, ha sido descrita en la mayoría de senta engrosamiento e infiltración leucocitaria, es­
metacercarias en berros y otros vegetales acuáticos (d). Los hospederos definitivos (hombre y otros herbívoros), se los países; los casos humanos más numerosos pro­ pecialmente eosinófilos. El hígado aumenta su ta­
infectan al ingerir metacercarias, se fonnan distomas juveniles (e) que luego de atravesar el intestino, peritoneo y vienen de Chile, Cuba, Perú y Argentina. En Chile maño, con formaciones denominadas "microabs­
parénquima hepático, llegan a adultos en la vía biliar. se ha encontrado en todo el país, con excepción de cesos", de color blanquecino y de aproximadamente
la zona de Magallanes. En Europa, se la describe en 2 mm de diámetro.
los países del Mediterráneo, especialmente en Fran­ Estos microabscesos son pequeños focos
cia y en Argelia y otras zonas norafricanas. necróticos y están constituidos por una infiltración
de cilios, de unos 130 a 180 µm, que escapa del huevo son de forma redondeada con una larga y fina cola Las pérdidas por decomiso de hígados con leucocitaria, con detritus amorras y cristales de
a través del opérculo. El miracidio nada libremente no bifurcada (Figura 43-5). Por cada miracidio distomas pueden ser cuantiosas, sobre todo en las Charcot-Leyden; más afuera, se observa una capa
siendo estimulado por la luz y, en un plazo no mayor que penetra en el caracol, se producen entre qui­ regiones en las cuales más del 80% del ganado está de células epitelioideas y algunas células gigantes.
de veinticuatro horas, debe encontrar a su hospedero nientas a seiscientas cercarlas. Estas larvas aban­ infectado. Los animales adquieren la infección por Rodeando este conjunto, aparece una infiltración de
apropiado, el cual es un pequeño caracol de agua donan activamente el caracol y se dirigen nadan­ la ingestión de pastos que contienen las metacerca­ eosinófilos.
dulce del género Limnaea, de 5 a l O mm de longitud do hacia las hierbas que crecen en el agua para rias del parásito. Habitualmente la infección es En el período de estado, las adherencias se han
(en Europa, L. truncatu/a; en Argentina y Chile L. adherirse a sus hojas; luego pierden la cola y se masiva, afectando el estado general del animal, su hecho firmes y, excepcionalmente, faltan. En el
viatrix o Ga/ba (l>.) viatrix) (Figura 43-4). El miraci­ enquistan. La cercarla enquistada o metacercaria peso y la producción de carne, leche o lana. La hígado se observan nódulos amarillentos de medio
dio es atraído por algunas sustancias expelidas por el mide alrededor de 500 µm, por lo cual es difícil­ metacercaria resiste bien las condiciones adversas cm de diámetro que, cuando se los corta, presentan
caracol, el cual penetra por su pie, perdiendo sus cilios. mente visibÍe a simple vista (Figura 43-6). Posee del medio ambiente, pero en el pasto seco pierde un material de aspecto caseoso. Estos son los mis­
Dentro del caracol, se forma un esporoquiste, ele­ una gran vitalidad y constituye la forma infectante rápidamente su capacidad infectante. Tagle resalta mos focos necróticos del período de invasión que,
mento alargado como una bolsa, en cuyo interior, y a para los hospederos definitivos,. , ,. que en los países con cambios estacionales francos, ahora, en la periferia, presentan una cápsula con..,.
partil' de brotes getmiiiales se forman dos generacio­ La metacercaria contenida en el pasto o en algu­ el ganado; que es llevado a las zonas montañosas escaso infiltrado linfoplasrnocitario que ha reern- ·
nes de redias y, luego, las cercarlas. Las cercarlas nas verduras, especialmente los berros (Nasturtium durante la estación fria del año, contamina con sus plazado a la capa de eosinófilos. En la vecindad de
378- PARASITOLOGIA MEDICA FASCIOLOSIS 379

anticuerpos precipitantes, aglutinantes y fijadores


del complemento) y de tipo celular, la cual se puede
demostrar por la transferencia de protección me­
diante linfocitos.
La F. hepatica se localiza en los conductos
biliares intrahepáticos. Sin embargo, el helminto
puede desplazarse hacia el conducto cístico la ve­
sícula biliar, el colédoco o la ampolla de Vat�r y, en
tales casos, se producen complicaciones que, inclu­
so, obligan a intervenciones quirúrgicas de urgen­
cia. Rara vez algunos distomas jóvenes no conti­
núan su evoluqión normal, ni penetran en el hígado.·
Se pueden producir así las distomatosis erráticas,
Figura 43-6. Metacercarias· de F. hepatica en hoja de de las que se han descrito localizaciones peritonea­
berro. les, pulmonares, cutáneas y en las cercanías del
hígado o, más raramente, en otros sitios. En el
prolina, interviene en la biosíntesis de colágeno. La peritoneo, los gusanos son envueltos por la serosa y
naturaleza química de la inducción de la hiperpla­ quedan como nódulos blanquecinos, visibles en el
sia de los conductos biliares, se demuestra porque acto quirúrgico. En la piel, aparece como un tumor
puede ser inhibida, en este modelo experimental, errático pruriginoso en el que sólo la exploración
mediante la azetidina, un inhibidor de la prolina. conduce al diagnóstico
En la fasciolosis se ha demostrado una resisten­
cia natural que _se manifiesta por una reacción fi­ Sinlomatología
brótica que afecta a los distomas jóvenes en su etapa
de invasión y a los adultos localizados en la vía biliar. La aparición de síntomas está condicionada por
Esta reacción tisular sería inespecífica y su grado de el número de metacercarias ingeridas. Si la infec­
eficacia depende de la especie animal parasitada. En ción es reducida, puede ocurrir que no haya sínto­
la oveja, la rata y el conejo, la reacción tisular, aun­ mas; pero la ingestión abundante o sucesiva de me­
que severa, no logra aislar a los parásitos y estos tacercarias, determina un cuadro clínico grave.
pueden completar con facilidad su ciclo de desarro­ Los síntomas y signos son diferentes en el perío­
llo; en el vacuno y el hombre, la reacción fibrótica do de invasión y en el período de estado de la
logra aislar y matar a una gran cantidad de distomas fasciolosis. Si se produce una complicación (empie­
jóvenes y adultos; en el hámster, el cerdo y los ma vesicular o litiasis), el cuadro clínico cambia
carnívoros, esta reacción es aún más eficiente, por­ considerablemente.
que detiene, aísla y mata tanto a los helmintos jó­
venes que migran, como a los adultos. Período de invasión. En esta fase aparecen sín­
La inmunidad adquirida es de tipo humoral (con tomas por la migración del distoma joven a través
del organismo; dura alrededor de dos meses y pue­
de pasar inadvertido. Corrientemente se presenta la
sintomatología siguiente:
l. Dolor. .Tal vez es el síntoma más constante.
Localizado en el hipocondrio derecho, es de carác­
ter variable: desde un simple malestar hasta el dolor
franco, de tipo cólico biliar. A veces, se presenta
como una sensación de peso o como un ardor en el
Figura 43-5. Desarrollo de F. hepatica. (A). En el medio acuático el miracidio abandona el huevo a través del opérculo. hipocondrio derecho, irradiado hacia la región esca­
(B) El miracidio nada en busca del caracol. (C) Cercaría libre en el agua. (D) Metacercaria (Cortesía del Dr. Ronald pular homónima o bien existe una sensación de
Arroyo, Costa Rica). opresión en la base del tórax derecho, con un dolor
en forma de cinturón que abarca todo el perímetro
los focos necróticos, hay zonas de esclerosis de los La hiperplasia de los conductos biliares no es torácico y que aumenta cuando se inspira profunda­
espacios portobiliares con infiltrado linfocitario. provocada sólo por el contacto fisico del parásito, mente. El dolor se acentúa con la presión en la
Cerca de los focos necróticos, los conductos biliares puesto que se puede desarrollar por trematodos pared torácica sobre el hígado y no tiene relación
interlobulares aparecen dilatados y esclerosados, con adultos colocados en sacos especiales en la cavidad con las comidas.
una reacción inflamatoria crónica pericanalicular. peritoneal de ratas. En_este modelo experimental se 2'. Hepatomegalia. Es dolorosa y de grado varia­
El epitelio está alterado' o falta en algunas zo·nas, o ha demostrado quéJa hiperplasia es inducida quí­ Figura f:13:7. Corte histológico de F. hepatica·en canalículo
biliar. Se observa fibrosis péricanalicular e hiperplasia ble: se debe a la congestión e inflamación del parén-
presenta una hiperplasia de tipo pseudoglandular micamente por la F. hepatica, mediante la produc­ quima hepático.
(Figura 43-7). ción de prolina. Este aminoácido, como hidroxi- pseudoglandular del epitelio.
380" PARASJTOLOGIA MEDICA FASCIOLOSIS 38!

3. Fiebre. Es constante y generalmente baja. Se digestivo, especialmente de tipo hepatobiliar, que helminto. Sus resultados dependen de la calidad del El prazicuantel, tan eficaz en la mayoría de los
trata de brotes febriles de corta duración -pocos puede o no presentar crisis febriles o urticaria, de antígeno empleado. Es positiva ya en el período de trematodos, no tiene acción de trascendencia en F.
días- precedidos de escalofríos. evolución aguda o crónica, acompañada de eosi­ invasión, con un solevantamiento o empastamiento hepatica.
4. Urticaria. Se presenta como grandes placas nofilia elevada y en el. que haya antecedentes de rojizo de un área que abarca el doble de la inocula­
pruriginosas, de duración fugaz. Suelen ser muy haber ingerido berros. ción inicial, a los treinta minutos de efectuada la Prevención
rebeldes al tratamiento sintomático. El diagnóstico se establece por métodos directos prueba, pudiendo persistir por veinticuatro o más
. cuando se encuentra al gusano o sus huevos, o in­ horas. Debe perseguir la destrucción de los caracoles,
Período de estado. Corresponde a la sintomato­ directos al detectar anticuerpos u otros signos de Las reacciones serológicas más utilizadas en la con lo que se cortará el ciclo evolutivo del parásito.
logía producida por la fasciola en las vías biliares, sensibilización del hospedero. fasciolosis son: ELISA, inrnunoelectroforesis (IEF), Una medida fundamental es la aplicación de sulfato
su hábitat definitivo. contrainrnunoelectroforesis (CIEF), doble difusión de cobre y de otras sustancias químicas en las aguas
Los síntomas son semejantes a los del período Métodos directos en agar, hemaglutinación indirecta y fijación del en que vive el caracol. Asimismo, los berros deben
de invasión, aunque más acentuados: complemento (véase El diagnóstico de laboratorio cultivarse con aguas libres de la contaminación con
l . Trastornos digestivos. Aparecen como una Fuera del hallazgo casual del gusano, durante el de las parasitosis). Las técnicas de ELISA, IEF y las heces de los animales.
dispepsia de "tipo biliar" con anorexia, sensación acto quirúrgico de la vía biliar, el diagnóstico CIEF presentan un alto grado de sensibilidad y es­ Las medidas de saneamiento de las aguas, me­
de plenitud abdominal, flatulencia, náuseas, vómi­ parasitológico se establece por la búsqueda de los pecificidad, lo cual las hace recomendables para su diante la desecación de los charcos y la rectificación
tos, predominio de la constipación con episodios huevos del distoma en la bilis y en las heces. Estos empleo rutinario en el laboratorio. de los cursos de agua, así como el drenaje de las
diarreicos ocasionales e intolerancia de algunos ali­ exámenes son negativos en el período de invasión zonas pantanosas, son costosas y difíciles de llevar
mentos (grasas, frituras, huevos, etc.). de la fasciolosis, puesto que los gnsanos aún no han Pruebas de funcionalismo hepático. Las pruebas a la práctica.
2. Dolor. En hipocondrio y hemitórax derechos. llegado a la madurez sexual, la que sólo se alcanza de floculación habitualmente son normales o se pre­ Corno profilaxis individual, se recomienda abste­
Cuando el dolor es permanente, es menos intenso; en las vías biliares, a los dos meses de ingeridas las sentan levemente alteradas; la bilirrubinemia, normal nerse de comer berros crudos.
en cambio, los dolores con características de cólico metacercarias. o elevada, sobre todo en los casos de migración de
biliar son más frecuentes que en el período de inva­ La bilis, obtenida por sondeo duodenal, se colo­ los parásitos por la vía biliar. Las fosfatasas alcalinas
sión, aún en ausencia de complicaciones. En ambos ca en capas delgadas en placas de Petri y se observa con frecuencia están elevadas; su alteración apoya BIBLIOGRAFIA
períodos de la enfermedad, estos cólicos pueden ser con el microscopio usando aumentos menores. Es­ el diagnóstico de la fasciolosis y su normalización
tan intensos que suelen plantear la necesidad de una pecialmente recomendable es el examen de los co­ constituye un índice de curación de la parasitosis. Abdul-Hadi S. Contreras R, Tombazzi C y cols. Hepatic
interv�nción quirúrgica, en la que se descubre una pos mucosos. El examen de las deposiciones se debe Sin embargo, pueden persistir altas en aquellos ca­ fasciolíasis: case report and review. Rev lnst Med Trap
vesícula biliar sana. Algunas de estas operaciones repetir durante 1 O días seguidos y el médico debe sos asociados con litiasis biliar. Sao Paulo 1996; 38:69-73.
inútiles se podrían evitar si se estudiara la eosinofi­ advertir al laboratorio la sospecha diagnóstica para Apt W, AguileraX, Vega F, Alcaino H y cols. Prevalencia
lia en el hemograma. Sin embargo, aún con esta el empleo de métodos coprológicos especiales, no Diagnóstico por imágenes. En infecciones ma­ de fascioliasis en humanos, caballos; cerdos y conejos
investigación, continuarán operándose enfermos con rutinarios (véase la Sexta Parte: El diagnóstico de sivas, la F. hepatica, al migrar durante el período de silvestres de Chile. Biol Oficina Sanit Panam 1993;
fasciolosis en los que la enfermedad se desarrolla. laboratorio). invasión por el parénquima hepático, provoca le­ 115:405-14.
con una eosinofilia normal. Es recomendable la búsqueda simultánea de hue­ siones que se pueden visualizar m e diante Apt W, AguileraX, Vega F, Miranda y cols. Treatment of
3.Jctericia. Se presenta subictericia o ictericia vos en las heces y en la bilis, porque ambos métodos ecotomografia, cintigrafia o escáner. Se puede en­ human cronic fascioliasis with triclabendazole: drug
transitoria con más frecuencia que en el período se complementan. contrar hepatornegalia e imágenes de sustitución efficacy and serologic response. Am J Trap Med Hyg
anterior. Es de tipo obstructivo por el paso de los que deben diferenciarse con procesos metastásicos. 1995; 52:532-5.
gusanos al colédoco. Métodos indirectos Arjona R, Riancbo JA, Aguado JM y cols. Fascioliasis in
4.Hepatomegalia. Es más acentuada que en el Tratamiento developed countries: a review of classic and aberrant
período anterior. Alteraciones del hemograma. Es frecuente la fonnsofthe disease. Medicine(Baltimore) 1995; 74:13-
5.Fiebre. Aparece en fonna de brotes debido al leucocitosis con una desviación moderada a la iz­ En la actualidad, la droga más promisoria para el 23.
proceso inflamatorio de las vías biliares, especial­ quierda y una anemia de magnitud variable. Pero, el tratamiento de la fasciolosis es triclabendazol, de­ Chen MG, Mott KE. Progress in assessment of morbility
mente cuando se produce una obstrucción con pro­ signo más importante para la sospecha diagnóstica rivado benzoirnidazólico de amplio uso en medicina due toFasciola hepatica infection. Trap Dis Bull 1990;
ducción. de cavidades cerradas. de la fasciolosis es la eosinofilia elevada. Es común veterinaria y recientemente en la infección crónica 87:1-38.
En el curso clínico de la fasciolosis se pueden encontrar cifras de 40 a 60% de eosinofilia relativa. del hombre. Su metabolito activo, sulfóxido, tiene Dawes B, Hughes DL: Fasciolosis: The invasive stages of
producir complicaciones quirúrgicas importantes; El ascenso es progresivo durante el período de inva­ una potente acción sobre el tegumento de F. F. l,epatica in mammalian hosts. Adv Parasítol 1964;
se han descrito colecistitis agudas, empiemas vesi­ sión y se mantiene en el período de estado. Después hepatica adulta y juvenil. Se administra vía oral en 2:97-168.
culares y obstrucciones coledocianas en pacientes del tratamiento, desciende paulatinamente, llegando dosis única de 1 O rng/kg de peso, con lo que se Faiguenbaum J, Feres A, Donckaster R y cols. Fascioliasis
que no sufren de litiasis y en los que sólo se encuen­ a cifras normales algún tiempo después de la cura­ obtiene curación en alrededor de 80% de los casos; (Distomatosis) hepática humana. Bol Chile Parasitol
tra F. hepatica en la vía biliar. ción de la enfermedad. Sin embargo, existe un grupo los pacientes que persisten infectados, responden 1962; 17:7-12.
Por otra parte, también es frecuente la asocia­ de pacientes con eosinofilia normal. Otros pueden bien a una segunda dosis del medicamento. Tiene Girotra KL, Isseroff H. Fascio/a hepatica: Azetidine
ción entre fasciolosis y litiasis; en estos casos, la evolucionar con eosinofilias fluctuantes, por lo cual una muy buena tolerancia clínica y a los controles inhibition ofbile duct hiperplasia in infected rats. Exp
intervención quirúrgica se efectuará después del tra­ es recomendable repetir este examen ante un caso de de laboratorio. Parasitol 1980; 49:41-6.
tamiento de la parasitosis. sospecha clínica de fasciolosis con eosinofilia nor­ De esta forma, triclabendazol viene a reemplazar Hammouda NA, El-Mansoury ST, El-Azzouni MZ, El­
mal (Véase el Capítulo 62: Eosinofilia y parasitosis). a la emetina, la dehidroernetina y al bithionol, usados Gobari Y. Therapeutic effect of triclabendazole in
Diagnóstico durante décadas a pesar de su potencial to¡ácidad y patients with fascioliasis in Egypt. A preliminary study.
··Reacciones inmunobiológicas. La intrader­ a la dificultad de sU disponibilidad-en algunos paí­ J Egypt Soc Parasitol 1995; 25:137-43.
Se plantea frente a un enfermo con un trastorno morreacción utiliza, como antígeno, fracciones del ses.
382.. PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo44

LairdPP, Boray JC. Human fascioliasis successfully treated


with triclabendazole. Aust N Z J Med 1992; 22:45-7.
surface changes in adult andjuvenile flukes following
treatment in vitro with the sulphoxide metabolite of
OTRAS PARASITOSIS DE LOS TEilDOS
Stitt AW, Fairweather I. Fasciola hepatica: tegumental triclabendazole (Fasinex). Parasitol Res 1993; 79:529-
36. ANTONIO ATIAS

Hemos creído de interés presentar una serie de un individuo con T. brucei en su sangre. Los tripo­
parásitos y parasitosis de los tejidos que no han sido mastigotos se multiplican en el intestino e invaden
abordados en los capítulos precedentes, los cuales, las glándulas salivales del insecto. Cuando la mos­
si bien pueden tener importancia clínica, no son ca infectada pica al hombre susceptible, le transmi­
prevalentes en América Latina. Sin embargo, a ellos te los tripanosomas contenidos en la saliva. En el
debemos referirnos, aunque sea brevemente, dado huésped vertebrado, los tripanosomas se multipli­
que las comunicaciones cada vez más expeditas can como tripomastigotos en la sangre y en los teji­
hacen imperioso el diagnóstico diferencial con otras dos.
patologías. La tripanosomosis africana sigue siendo una de
las amenazas más serias para la salud del hombre,
PROTOZOOS y representa un gran obstáculo para el desarrollo de
la industria agropecuaria. Afecta a unos treinta y
Trypa11oso111a brucei (Tripanosomosis africana cinco millones de personas y veinticinco millones
o enfermedad del sueño) de animales, constituido por ganado domésticos
expuesto al riesgo de la infección. En extensas áreas
Es la infección del hombre y de la mosca tsetsé endémicas, la crianza de ganado doméstico es im­
producida por Trypanosoma brucei. En el hombre, posible debido a la alta incidencia de la infección.
provoca la enfermedad del sueño de tipo agudo o La enfermedad del sueño se presenta en algunas
rodesiana y de tipo crónico o gambiana, las cuales regiones de Africa, donde abunda la mosca tsetsé.
evolucionan hasta la producción de una degenera­ La forma aguda o rodesiana es transmitida princi­
ción del tejido nervioso cerebral, con deterioro men­ palmente por G. morsitans, que vive en los bosques
tal progresivo y coma. y en los matorrales, especialmente en Tanzania y
Los agentes causales de la enfermedad del sue­ otros treinta y cinco países de la región central de..
ño son los tripanosomas que, hasta no hace mucho, Africa. Fuera del hombre se ha encontrado infecta­
se conocían como Trypanosoma gambiense y T. do a un antílope, que constituye un reservorio de la
rhodesiense, los cuales presentaban caracteres bio­ infección. En el Africa occidental se observa la for­
lógicos y morfológicos tan similares que, actual­ ma crónica o gambiana la cual se transmite espe­
mente, se ha optado por considerarlos bajo la deno­ cialmente por G. palpa/is que vive en los bosques y
minación común de Trypanosoma bnicei, pertene­ pica al hombre, cuando éste se acerca a los cursos
cientes al subgénero Trypanozoon. Así, se distin­ de agua.
gue un "complejo bnicei", formado por tripanoso­ Los casos fatales, durante el período agudo, pre­
mas de diversas cepas que producen la infección del sentan hemorragias de parénquimas, especialmente
hombre y de los animales. En la antigua clasifica­ del pulmón y de la médula ósea, e hiperplasia del
ción, se reservaba el nombre de T. brucei para las sistema retículo endotelial; en esta fase aguda toda­
cepas de los tripanosomas que afectaban sólo a los vía no existe encefalitis. En aquellos casos con más
animales y no al hombre. T. brucei pertenece a la de seis meses de evolución, el signo más importante
sección Salivaria, porque la transmisión al verte­ es la anemia normocítica y leucopenia, debida al
brado se efectúa por la saliva del insecto vector, a compromiso fibrótico de los ganglios linfáticos, del
diferencia de T. cnizi que forma parte de la sección bazo y de la médula ósea, y aparece también el
Stercoraria, porque la transmisión se hace por las deterioro del SNC. La leptomeninges está engrosa­
deyecciones del insecto. da y existe una infiltración de los vasos cerebrales
En el hombre, el T. bnicei alcanza un tamaño por células redondas que se disponen como man­
variable entre 10 y 20 µm de longitud. Su ciclo guitos perivasculares. Este compromiso vascular
biológico implica a un huésped invertebrado y a las conduce a una degeneració)l cerebral, con deterioro
moscas hematófagas del género Glossina (mosca progresivo de la psiquis, hasta que finalmente se 1.
tsetsé), las cuales adquieren la infección al picar a llega al coma.
384 PARASITOLOGIA MEDICA OTRAS PARASITOSIS DE LOS TEJIDOS
385

El período de incubación de la enfennedad pue­ tebrado es el Rhodnius profaus, el cual se infecta al El parásito destruye el glóbulo rojo y la hemog­ riores, perfora con su extremo anterior las distinta
lobina así liberada, se convierte en pigmento biliar, s
de variar entre una y dos semanas, cuando se trata ingerir sangre de animales que contenga tripomas­ capas de aquélla y excreta una sustancia tóxica que
de la fonna rodesiana, y llegar hasta un año, en el tigotos circulantes; en el intestino, los flagelados se cuyo <;:xcedente se deposita en los tejidos. Si el hí­ lesiona los tejidos Y forma una ampolla vesicular
caso de la gambiana. En el punto de la picadura multiplican activamente, invaden, en el estado de gado no es capaz de utilizar toda la hemoglobina és� s� destruye y deja una úlcera pequeña, con W:
aparece un chancro de inoculación de fonna nodu­ epimastigotos y de tripomastigotos metacílicos, las liberada, se produce hemoglobinuria, las orinas ad­ ?rific10 en su centro, por el cual, cuando el individuo
lar, producido por la extravasación de sangre y !in­ glándulas salivales del insecto. Cuando el reduvídeo quieren un tinte rojizo. A este signo se debe el nom­ infectado se sumerge en el agua, la hembra hace la
fa, rico en tripanosomas. En la fase aguda existe . vuelve a picar a otro animal o al hombre, le inocula bre con que se conoce la enfennedad en el ganado: P?stura de miles de larvas, que finalmente penetra­
cefalea pertinaz, agitación, insomnio y síndrome el parásito. Es decir, el mecanismo de transmisión "fiebre de aguas rojas"; pero también se la llama ran en los Cyclops. Los gusanos provocan un esta­
febril. En la fonna gambiana, aparecen adenopatías­ de T. rangeli es por la saliva y nci por deyecciones "fiebre de Texas''; "Tristeza" (en Sudamérica) y "fie­ do de sensibilización y muchas de las manifestacio­
dolorosas en la parte posterior del cuello y un pro­ como ocurre en T. cntzi. bre por garrapatas" (en Australia). nes que producen son alérgicas. Las úlceras ctitá­
gresivo compromiso del estado general, anemia, En el hombre no se ha descrito ninguna patolo­ En los casos humanos la sintomatología varia n eas pueden infectarse· con micoorganism.os y oca­
entre las infecciones leves, subclínicas o inaparen­ _
trastornos mentales y somnolencia. Finalmente, se gía atribuible a T. rangeli. Se le puede encontrar en s10nar abscesos de cierta gravedad. El gusano se
produce el coma que da el nombre a la enfenneda�. la sangre, pero siempre con parasitemias bajas. Se tes, descubiertas mediante serología, y los casos extrae de las ulceraciones.
El diagnóstico se basa en los antecedentes epi­ diferencia de T. 'cruzi por su tamaño, mide alrede­ clínicos benignos con fiebre y malestar general; los
demiológicos sobre la procedencia de zonas de en­ dor de 35 µm de largo, y presenta un blefaroplasto enfermos graves presentan fiebre elevada, fuhninan­

·_-1
demia y de haber sido picado por moscas tsetsé. En pequeño y alejado de la extremidad posterior del ·- - te, acompañada de anemia, hemoglobinuria e icteri­ A11giostr011gyl11s ca11to11e11sis
la fonna aguda rodesiana, el diagnóstico se hace parásito. cia (Meningitis eosinofilica)
por el hallazgo del parásito en la sangre, mediante Durante la fase aguda de la inyección, el diag­
la técnica de la gota gruesa. En las fonnas crónicas, Babesia spp. (Babesiosis o piroplasmosis) .i' nóstico se hace mediante frotis y gota_ espesa de Conocido en Oriente como el gusano de los
los parásitos son muy escasos en la sangre y se los !. sangre. Además, se dispone de varias pruebas sero­ pulmones de las ratas, el Angiostro11gyl11s canto­
debe buscar en el líquido ganglionar, cuando exis­ Es la infección humana producida por Babesia lógicas para el diagnóstico de las formas agudas y
ten adenopatías palpables, o en el líquido cefalorra­ spp. de origen bovino, murino o de Talpa europaea.
:¡ crónicas de la babesiosis animal; los antígenos se
nensis es un pequeño nematodo de unos 20 mm de
largo por 0,30 mm de diámetro. Su ciclo evolutivo
quídeo, cuando ya existe una afección del sistema La enfermedad se caracteriza por fiebre, anemia obtienen de la sangre de animales infectados. Las es complejo: los huevos del parásito eclosionan
nervioso central. hemolítica, hepato y esplenomegalia. Sin trata­ pruebas incluyen fijación del complemento, hema­ en el tejido pulmonar de la rata, su huésped defi­
Entre los métodos indirectos, se utiliza la inmu­miento, los casos suelen ser fatales. glutinación indirecta, aglutinación en lámina al látex nitivo habitual, y la larva que emerge sube por la
nofluorescencia indirecta y las reacciones de inmu­ El protozoo es un apicomplexa del orden Piro­ y capilar, anticuerpos para fluorescencia indirecta, tráquea y es expulsada al exterior por la secreción
noprecipitación en gel, en sangre o en LCR, para la plasmida, familia Babesiidae, que comprende cerca precipitación en gel y ELISA. Para estudios en el bronquial o por las heces, si es previamente deglÚ­
búsqueda de anticuerpos antitripanosoma o de IgM de veinte especies de las cuales cinco atacan al ga­ campo, se ha empleado con éxito la prueba de aglu­ tida. Los hospederos intermediarios son moluscos
específica. nado vacuno: Babesia bige111i11a, de distribución uni­ tinación con látex en láminas. en los cuales las larvas mudan y crecen (13). Cuan­
El tratamiento en las fonnas iniciales, cuando versal es la más importante; B. bovis, que ocurre en Existe poca experiencia en el tratamiento de la do la rata ingiere moluscos o huéspedes
no hay afección encefálica y el examen del líquido Europa; B. arge11tina, en América del Sur y Central; babesiosis en el hombre. El.éxito terapéutico debe paraténicos infectados, las larvas, vía circulación
cefalorraquídeo es normal, se utiliza la suramina. B. herbera y B. majar, en Africa, URSS y Europa. basarse en la erradicación del parásito demostrado hepática y pulmonar, alcanzan el cerebro y perma­
Si ya existe compromiso del SNC, se emplea el Se han descrito, además, otras especies en ovinos, en los frotis de sangre y en la inoculación experimen­ necen allí por unas cuatro semanas; luego, ya ··
melarsoprol, el cual, a diferencia de la suramina equinos, porcinos, cánidos, felinos y múridos. La tal en hámster. La pentamidina a dosis de 4 mg/kg/ como adultos jóvenes, emergen a la superficie'del
penetra la barrera hematoencefálica. Ambos medi­ mayoría de ellas se circunscriben al Viejo mundo. día por vía intramuscular, provoca mejoria clínica, SNC y por vía sanguínea llegan al puhnón; luego
camentos son tóxicos y requieren de especiales cui­ La Babesia spp., se presenta como una forma aunque persistan algunos parásitos en la sangre. de la cópula, comienzan la postura de huevos. El
dados en su manejo. apigmentada, piriforn1e, redondeada u oval, dentro En la actualidad, pareciera que el tratamiento de hombre es huésped accidental que se infecta por
La pentamidina es efectiva en las formas agudas de los hematíes y se divide en dos o en cuatro elección es mediante la acción sinérgica de la la ingestión de carnes de moluscos o de huéspe­
recientes, y también es usada en la quimioprofilaxis. merozoitos. Parasitan, además de los glóbulos ro­ clindamicina 20 mg/kg/día parenteral y quinina 25 des paraténicos como son los camarones, o bien
jos, a los linfocitos, histiocitos y eritroblastos. En la
La profilaxis es dificil de abordar por los aspec­ mg/ kg/día por vía oral, durante siete días. por la ingestión de ensaladas de verduras que han
tos ecológicos que envuelven a Glossina spp., el garrapata de los Géneros Boophi/us, Ixodes, etc. sido contaminadas por secreciones de babosas o
bosque y la selva, y el riesgo de infección del hom­ (véase el Capítulo 55: Garrapatas), infecta los ova­ NEMATODOS caracoles. Habituahnente, en el hombre el A. canto­
bre que vive en comunidades con bajas condiciones rios, produciendo la transmisión por los huevos a nensis no alcanza el estado adulto. La infección es
socioeconómicas. Se debería tratar de modificar el nuevas garrapatas (transmisión transovárica). En los Drac1111culus medi11e11sis prevalente en las Islas del Pacífico, Hawai, Taiwán
biotopo propicio para la mosca tsetsé, mediante la animales, la enfermedad deriva de la destrucción por (Dracunculosis o dracontosis) y Tailandia.
tala. de árboles y de la vegetación, el uso de insec­hemólisis de los glóbulos rojos, con hemoglobinuria En el hombre, la angiostrongilosis provoca una
ticidas y el tratamiento del reservorio constituido ("fiebre hematúrica"). La dracunculosis o dracontosis es causada por meningitis eosinofilica con compromiso del cerebro
por el hombre infectado. Previamente se creía que el hombre era inmune el Dracunculus medi11ensis (gusano de Guinea o y médula espinal e inflamación de la leptomeninges,
a las infecciones provocadas por Babesia. En 1957 Filaria de Medina, común en extensas áreas de la estructuras en las cuales suelen verse las larvas
Trypa110s0111a ra11geli se publicó el hallazgo del primer caso humano en Unión Soviética, Asia y Africa). Mide 1,20 metros de móviles de los gusanos. Microscópicamente, existe
Yugoslavia, en un enferrI!O esplenectomizado que l�go y 2 mm de ancho. Se localiza en el tejido conec­ una marcada inflamación meníngea con linfocitos,
En ciertos países de América (Guatemala, El falleció a causa de la enfennedad y en el cual se ll_l'.o y recorr? distintas zonas del cuerpo. La infec­ monocitos y eosinófilos, y algunos granulomas que
Salvador, Colombia, Venezuela, Guyana, etc.), se identificó B. bovis. Desde entonces, se han publica- cion se adquiere por el consumo de agua que con­ rodean a gusanos muertos.
_
ha descrito otra trípanosomosis de los animales;·-,,, do nuevos casos en-América-del Norte (México.y - · tiene los hospederos intermediarios crustáceos El cuadro clínico se caracteriza por cefalea, rigi­
que puede afectar también al hombre. Es la infec- Estados Unidos) y en Europa (Escocia, Francia, Ir- copépodos del género Cyclops. La hembra.se desliza dez de la nuca y trastornos sensoriales (véase el
ción por Trypanosoma rangeli, cuyo huésped inver- landa y URSS). hacia la piel, especiahnente de las extremidades infe- Capítulo 45: Parasitosis del sistema nervioso cen-
386 PARASlTOLOGIA MEDICA OTRAS PARASlTOSIS DE LOS TEJIDOS
387
tral). El LCR es turbio u opalescente con hiperalbu­ que actúan como huéspedes paraténicos de la infec­ cuello. Estos tumores se abscedan y dan salida a te, en los EstadosUnidos, en Australia y en Sudáfrica.
minorraquia y presenta pleiocitosis con abundantes ción. El hombre se infecta y pasa a ser un huésped pus en el cual se pueden recuperar gusanos y hue­ Si bien existe esparganosis animal en Latinoamérica
eosinófilos. El diagnóstico se basa en la prueba de paraténico más, cuando ingiere carnes crudas o mal vos. Su evolución es tórpida, habitualmente de años.
cocidas que tengan L3 y, probablemente, también y en Europa, no se han denunciado casos humanos.
ELISA (utilizando como antígeno larvas L4 y adul­ Se ha intentado el tratamiento con dietilcarbamazina El hombre puede infectarse, ocasionalmente, con
tos del gusano), en la eosinofilia sanguínea y por por beber água con copépodos, en los cuales las y tiabendazol, pero los resultados han sido incier­
larvas pueden evolucionar hasta L3. esparganos por vía oral, al ingerir copépodos infec­
TAC que demuestra pequeñas áreas hipodensas. La tos. tados con procercoides o al comer carnes crudas de
evolución puede ser benigna, pero en ocasiones e� La gnatostomosis, prevalente en Japón y Tai­
pescado o de anfibios (ranas o serpientes) en las
grave, e incluso mortal. Se ha intentado efectuar landia, se caracteriza por las lesiones provocadas Dioctophyma re11ale mismas condiciones. También puede adquirir la in­
tratamiento con tiabendazol con resultados incier­ por desplazamiento de las larvas de G. spinigerum
fección al aplicarse, con fines curativos sobre las
tos. En infecciones experimentales en ratas, se han por los tejidos del hombre. Puede que se produzcan El Dioctophyma renale es uno de los más gran­ heridas, especialmente las producidas a la altura de
obtenido mejores resultados empleando mebenda­ lesiones en los tejidos superficiales como nódulos o des nematodos encontrados en el hombre, aunque los ojos, emplastos de carnes crudas de ranas infec­
zol e ivermectina; sin embargo, en esta afección, tumefacciones que se desplazan por la piel, al igual su infección es excepcional: Se ubica a nivel de la tadas con esparganos.
como en otras parasitosis del SNC, el tratamiento que las larvas migrantes, o formen túneles en tejido pelvis renal y peritoneo de muchos mamíferos, espe­ La esparganosis del hombre no suele ser dema­
medicamentoso debe ser cauto, porque, a veces, la subcutáneo y masas musculares; pero también pue­ cialmente en el perro. Presenta un evidente dimorfis­ siado peligrosa, excepto si es afectada la órbita. Los
sintomatología se agrava cuando los gusanos mue­ den migrar a otros órganos como faringe, intestino, mo sexual: los machos miden entre 15-20 cm de largo estados larvales, al movilizarse en los tejidos o en la
ren en el cerebro. vejiga, etc. Se le ha encontrado en el ojo, probable­ por 5 mm de ancho y las hembras, entre 20-100 cm por piel, provocan dolor, edema y eosinofilia elevada.
mente por infección vía nervio óptico o a través de 5-12 mm. Sus huevos son mamelonados y contienen
G11at/1osto111a spi11iger11111 la esclera por el uso muy en boga en la medicina dos células embrionarias características; en el agua, Tae11ia 11111/ticeps y Tae11ia seria/is
(Gnatostomosis) popular, de emplastos de carnes de reptiles infecta­ los huevos infectan peces y anfibios, los que cons­ (Cenurosis)
.dos. De especial trascendencia es el compromiso tituyen la fuente de infección para los hospederos
El Gnathostoma spinigerum, productor de la del SNC, en donde las larvas de G. spinigerum definitivos. El hombre se puede infectar por inges­
provocan una meningitis eosinofilica, con compro­ Infección por larva de Taenia seria/is (sinonimia:
gnastostomosis, es un pequeño nematodo espiru­ tión de peces crudos que habitualmente son hospe­ Multiceps multiceps). Los huéspedes definitivos son
roideo, grueso y robusto, de color rosado, que mide miso del cerebro y médula espinal. En estos casos, deros paraténicos. El parásito provoca daño tisular los perros y algunos cánidos silvestres y los inter­
entre 10 y 30 mm el macho y entre 15 y 50 mm la el compromiso neurológico es de inicio brusco, con que puede, incluso, destruir el riñón. El diagnóstico mediarios son los ovinos y otros herbívoros domés­
hembra. Tiene una cabeza turgente, separada del dolores insoportables debidos a la irritación de las se hace por procedimientos no invasivos de imáge­ ticos, en los cuales se localiza en el sistema nervioso
resto del cuerpo por una clara constricción, y cu­ raíces de los nervios periféricos por los cuales las nes y se confirma con el hallazgo de huevos en la central y produce el vértigo o torneo. Accidental­
bierta por cuatro filas de gruesas espinas. El cuerpo, larvas alcanzan el SNC. Se produce irritación y orina. El tratamiento es quirúrgico. mente, el hombre puede infectarse con huevos de T.
también cubierto de espinas, termina en un extremo tendencia a hemorragia cerebral. El LCR es ligera­
seria/is y se le ha encontrado en el encéfalo, en el ojo
romo. Los huevos, no embrionados en el momento mente turbio, xantocrómico o hemorrágico, con CESTODOS y en el tejido celular subcutáneo. La sintomatología
de la postura, son ovalados y con un tapón mucoso pleiocitosis y eosinofilia. Para el diagnóstico se
que produce depende de su localización anatómica:
en uno de sus polos. emplea el hemograma, que revela una eosinofilia Por regla general, los cestodos adultos parasitan en el cerebro, como la de un tumor, dificil de distin­
El ciclo evolutivo es complejo: los gusanos adul­ muy elevada, prueba de ELISA para anticuerpos el intestino de sus hospederos y las formas larvarias guir de una neurocisticercosis o de hidatidosis cerea
tos viven en nódulos tumorales localizados en el IgG e IgE específicos, y la TAC con áreas de hiper­ o metacestodos se ubican en los tejidos. El hombre bral. En el ojo, se aloja en el humor vítreo y daña las
estómago de ratas, otros roedores, el perro y el gato, densidad por las hemorragias. En los casos facti­ es huésped intermediario accidental cuando alberga coroides y la retina.
los cuales son sus huéspedes definitivos. A partir de bles, el tratamiento es quirúrgico. en sus tejidos diversos metacestodos, como ocurre En el hombre es una infección de rara ocurrencia,
estas formaciones tumorales se expelen los huevos, con la cisticercosis o la hidatidosis, o la esparganosis de evolución lenta y, en su localización cerebral, de
los cuales salen al exterior por las heces hacia el Lagochilascaris millar y la cenurosis. mal pronóstico.
agua, donde se embrionan y dejan en libertad al
primer estado larval (L1 ). Esta primera larva nata­ El Lagochi/ascaris minar es un pequeño nema­ Spirometra spp. (Esparganosis)
toria es ingerida por crustáceos copépodos del géne­ todo que mide entre 5 y 20 mm de longitud por 0,5 TREMATODOS
ro Cyclops (primer hospedero intermediario) y en y 0,8 mm de diámetro, muy semejante a Toxocara, Los cestodos del género Spirometra están muy
su hemocele evoluciona a L 2, la cual ya presenta la y del cual se desconoce gran parte de su biología y relacionados con los del género Diphyllobotlzrium. Trematodos del hígado
característica cabeza prominente con ganchos. Cuan­ ciclo. En otra especie (L. sprenti), los gusanos adul­ El procercoide se desarrolla en copépodos (Cyc/ops
do los copépodos infectados son comidos por el tos se localizan en el estómago de la zarigüeya y Y otros géneros) y el plerocercoide, en los peces, Además de la fasciolosis, otros trematodos pue­
segundo huésped intermediario, constituidos por colocan huevos que infectan a otros pequeños ani­ anfibios o mamíferos. Los estados adultos se en­ den invadir la vía biliar del hombre. Las principales
peces, ranas y reptiles, se forman en su carne larvas males, en los cuales se enquista la forma larval en cuentran en los mamíferos, especialmente en los infecciones son provocadas por Clonorchis sinensis,

·.:I':·
de tercer estadio (L3) . Los huéspedes definitivos, al sus tejidos; el ciclo se completa cuando la zarigüeya perros y en los gatos. Entre otras caracteristicas, Opisthorchis spp. y Dicrocoe/ium dendriticum (véa­
ingerir esos animales, se infectan; los gusanos al­ ingiere esos animales infectados. Probablemente, el ambos géneros se diferencian por la disposición del se el Capítulo 49: Parasitosis del hígado).
canzan su madurez y en el estómago forman tumo­ hombre se infecta directamente con los huevos ya ú'.ero: las ramificaciones de los Spirometra están
res, completando el ciclo. larvados o por ingestión de carnes con la forma dispuestas en grupos y no en roseta. Las especies C/011orc/1is si11e11sis
Las larvas L3 se han encontrado en no menos de larval enquistada. más conocidas son el Spirometra mansoni, preva­
cuarenta y cuatro especies de vertebrados. Cuando Los pocos casos de infección humana han sido le?te en Asia Sudorienta!, y el S. mansonoides, des­
�-: . El gusano adulto mide 8 a 25 mm de largo y 1,5
son ingeridos por carnívoros no apropiados para descritos en Centro América, Islas del Caribe, Méxi­ cnto en los Estados Unidos. La infección por los· a 5 mm de ancho, con la ventosa oral más desarro­
;.;¡

1
que el gusano alcance su estado adulto, adquieren y co, Colombia y Brasil. La infección se caracteriza ple�ocercoides o esparganos determina la esparga­
sobrellevan larvas L3, que no madurarán; es decir, por la aparición de masas tumorales de crecimiento
·�-; llada que el acetábulo y provisto de un tagumento 1
nos1s?. la cual ha sido descrita en los animales y, sin espinas. Vive en la vía biliar, especialmente en los
existe una gran cantidad de especies de vertebrados lento y progresivamente dolorosas, localizadas en el tambien, en el hombre, en los países del Lejano Orlen- 1
.c • . canalículos de segundo orden. Coloca huevos de
.
:h ---
3&8 PARASITOLOGIA MEDICA OTRAS PARASITOSIS DE LOS TEJIDOS 389

unos 25 µrn de largo por 15 de ancho, con un opércu­ 2,5 mm de ancho, infecta la vía biliar de la oveja, de garganta, con congestión creciente de las fauces, mación de abscesos piógenos, parálisis facial y fenó­
lo asentado en un reborde de la pared del huevo. Son otros herbívoros y ocasionalmente, la del hombre. amígdalas, laringe y fosas nasales. El paciente pre­ menos asficticos que pueden llevar a la muerte. El
huéspedes definitivos el hombre y otros mamíferos: Los huevos embrionados son ingeridos por caraco­ senta catarro nasal, lagrimeo, tos, disnea, disfonía y cuadro clínico pasa mediante la expulsión espontá­
perros, gatos, ratas, cerdos, etc. Los huevos salen al les de tierra (no acuáticos, como en todos los otros disfagia. La afección puede complicarse con la for- nea del parásito o por la extracción quirúrgica.
exterior con las heces de estos huéspedes y el trematodos). En las secreciones del caracol salen las
miracidio que emerge de estos huevos, es ingerido cercarías, siendo ingeridas por hormigas que cons­
por caracoles, en cuyo interior se forman esporo­ tituyen el segundo huésped intermediario. Los her­
quistes, redias y cercarías. Estas últimas abandonan bívoros se infectan al ingerir hormigas con
al caracol y nadan activamente, siendo atraídas por metacercarias en su interior. La sintomatología es
los objetos acuáticos móviles; así, logran alcanzar al poco relevante y las infecciones del hombre suelen
segundo huésped intermediario, peces Cyprinidae, ser benignas y sin 9onsecuencias.
en cuya musculatura se enquistan, como metacercaria.
Los huéspedes definitivos se infectan al ingerir car­
nes de peces infectados. En el intestino queda en PENTASTOMAS
libertad la forma juvenil del parásito, la cual por la
Ampolla de Vater, alcanza la vía biliar, asciende hasta Los pentastómidos presentan un cuerpo
llegar a los canalículos biliares, donde madura y elongado y segmentado en anillos, su extremidad
· comienza la postura de huevos. anterior presenta dos pares de ganchos quitinosos
La clonorquiosis afecta a no menos de veinte que rodean la cavidad bucal y su extremidad pos­
millones de personas en China, Taiwan, Japón y terior es acintada. Parasitan las vías respiratorias y
Vietnam, países en donde se acostumbra la ingestión cavidades de reptiles, aves y mamíferos. La hembra
de carnes crudas de pescado. produce huevos embrionados que salen al exterior
En la fase aguda de la infección, se produce una por los bronquios o por las heces, si son previa­
marcada descamación del epitelio biliar, seguido de mente deglutidos. En el hospedero intermediario
biperplasia adenomatosa. En la fase crónica, existe (peces, anfibios, reptiles y, a veces, mamíferos) los
una progresiva fibrosis del parénquima hepático con huevos ingeridos por vía oral liberan en el intestino
proliferación de tejido conjuntivo alrededor de los una larva de cuatro patas, la cual migra a los tejidos,
conductos biliares dilatados. Una gran proporción queda encapsulada en un nódulo y se desarrolla
de individuos infectados son asintomáticos. Aque­ como una ninfa. El huésped definitivo se infecta
llos que presentan síntomas, tienen en la fase aguda, por carnivorismo, al ingerir animales en cuyos teji­
un síndrome infeccioso con eosinofilia, fosfatasas dos se encuentran esas ninfas quiescentes. Las
alcalinas elevadas y hepatomegalia dolorosa. Las ninfas liberadas en el intestino lo atraviesan y al­
complicaciones más importantes de la clonorquiosis canzan otros tejidos, habitualmente el pulmón,
son la cirrosis hepática, la formación de cálculos donde logran madurar completamente.
biliares, colangitis piógena y, probablemente, pre­ En el hombre se distinguen dos tipos de pentas­
dispone al colangiocarcinoma. El diagnóstico se tomosis: la visceral, cuando ingiere huevos y se
establece por el hallazgo de huevos del parásito en desarrollan ninfas en sus tejidos (huésped interme­
las heces. El tratamiento es con prazicuantel. La pro­ diario); y la nasofaríngea, si ingiere carnes infecta­
filaxis debe perseguir la abstinencia en la ingestión das con ninfas, las cuales migran y se localizan en la
de pescados crudos. región nasofaríngea (huésped definitivo de la infec­
ción).
Opistlwrchisfeli11e11s y O. viverri11i La pentastomosis visceral es provocada por va­
rias especies de pentastómidos, principalmente por
Estos trematodos que normalmente infectan al el Amzillifer armillatlls, y se le ha descrito en Asia
gato, pueden afectar al hombre. Es prevalente en y Africa. Habitualmente se trata del hallazgo en
Europa Oriental, URSS, India, Corea y Filipinas. Su necropsias, de nódulos que contienen ninfas a nivel
ciclo evolutivo és similar al ciclo del C. sinensis y la del hígado, bazo, pulmones, ganglios linfáticos, etc.
infección también es por la ingestión de pescados Probablemente su importancia clínica sea escasa o
crudos con metacercarias. En la opistorquiosis, la nula. En cambio, la pentastomosis nasofaríngea,
sintomatología, complicaciones, diagnóstico, trata­ provocada por la migración de ninfas de Linguaillla
miento y profilaxis, son similares a la de la clo­ se"ala a esa región anatómica, tiene trascendencia
norquiosis. clínica. Se la observa en el Levante, especialménte
en el Líbano y en Sudán, donde la infección se
Dicrocoeli11111 de11dritic11111 conoce como halzoun o ma"ara. Se caracteriza.
porque, a los pocos instantes de ingerir carnes de
Trematodo muy pequeño, 15 mm de longitud por ovejas o cabras, se produce un dolor punzante en la
TERCERA PARTE
Parasitología topográfica
Capítulo 45

PARASITOSIS
DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL ¡,
¡:_
GUSTAVODIAZ-PEREZ ¡,,1

El sistema nervioso puede ser afectado por diver­ hospitalarios, por la mayor o menor selección de los
sas parasitosis. Entre ellas se destacan, tanto por su pacientes, según las especialidades con que se cuen­
frecuencia como por su importancia, la cisticercosis te y la más acuciosa búsqueda o precisión de su
y la hidatidosis cerebral. Otras, como la amibiasis, diagnóstico. En el Instituto de Neurocirugía de San­
meningoencefalitis amibiana primaria, toxoplasmo­ tiago de Chile y en un período de veintiún años ,¡!
sis, malaria y enfermedad de Chagas, tienen una (1940-1960), Asenjo y cols. encontraron 145 casos
incidencia menor, por Jo cual se describirán solamen­ de cisticercosis cerebral en un grupo de 2.231 neo­
te en sus aspectos generales; en cambio, las dos formaciones encefálicas, lo que da una prevalencia
primeras se tratarán en detalle. de 6,9%. Para Brinck, la frecuencia de la neuro­
cisticercosis sería de dos a tres por mil en los hos­
pitales generales, pero ascendería a diez por mil en
NEUROCISI1CERCOSIS el ManicomioNacional de Santiago. EnBrasil, Spina­
Franca asigna un porcentaje medio anual de 2,98%
La cisticercosis, causada como ya se ha visto en de casos internados por neurocisticercosis en el
el Capítulo 21: Teniasis, por la larva de la Taenia período 1947-1955 en la clínica Neurológica de la
solium, es una de las parasitosis más frecuentes del Universidad de Sao Paulo. La íncidencia en México,
cerebro. El tejido nervioso ofrece condiciones favo­ según Robles, se puede evaluar en 7 a 10% de los
rables para la anidación y desarrollo del parásito. Es procesos expansivos endocraneanos y en España,
probable que exista un trofismo por el encéfalo a por los datos de Isamat de la Riva, tendría una fre­
causa de sus características especiales de circula­ cuencia de 3%. Pero los países donde se encuentra
ción, nutrición y protección. En esta localización, con mayor frecuencia serían India (16%) y Egipto
dicha parasitosis adquiere pronóstico de singular (12,5%) entre la casuística de tumores cerebrales. En
gravedad. términos generales, esta enfermedad es más frecuen•
En el cerebro, este metacestodo suele presentar­ te en los países y regiones donde se consume carne
se adoptando dos formas diferentes: la forma quís­ de cerdo parasitada.
tica (Cysticercus cellulosae) y la forma racemosa El 40% de los casos de cisticercosis humana
(Cj,sticercus racemosus). Se ha especulado acerca tiene localización cerebral. Se presenta habitualmen­
de las causas por las cuales esta larva adopta en te en los adultos jóvenes, con cierta predomínancia
ocasiones, la forma de un quiste ovalado y otras discreta por el sexo masculino. Las edades de mayor
veces, se presenta con expansiones extensas que la prevalencia se sitúan entre los veinte y cuarenta
asemejan a un racimo. Se supone que la diferencia años (80% de los casos) siendo menos frecuente en
morfoestructural se debería al ambiente en el cual la niños.
larva se desarrolla. Así, los quistes o vesículas ais­
lados, se ubican, de preferencia, en la corteza cere­ Clasificación. Dos puntos de vista nos parecen
bral vecina a la meninge, en el parénquima cerebral necesarios para la clasificación de esta enfermedad.
y en las cavidades ventriculares; las formas race­ Uno es su morfología y localización y, otro, su pre­
mosas Jo hacen en las cisternas basales y en los sentación clínica (Tablas 45-1 y 45-2).
espacios subaracnoideos, en cuyas anfractuosidades
Y remansos encontrarian un medio muy adecuado Anatomía patológica. En esta enferm_edad pue­
para expandirse. Esta última forma es la que produce den comprometerse todas las estructuras encefáli­
mayor reacción inflamatoria de vecindad y la que cas: meninges, parénquima cerebral, ventrículos,
tiene peor evolución. nervios craneanos y arterias cerebrales.
Las meninges se comprometen más en las for­
Frecuencia. Es muy variable de un país a otro, más racemosas, adquiriendo caracteres especiales.
como asimismo, en los di_stintos establecimientos Las Jeptomeninges se presentan engrosadas, adhe-
J
1
PARAS/TOLOGIA MEDICA PARAS/TOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL 395

TABLA45-1
CLASIFICACION DE LA NEUROCISTICERCOSIS, SEGUN SU MORFOLOGIA Y LOCALIZACION

¡
corticomeníngea
Quística (solitaria o múltiple) parenquimatosa
ventricular

{
ventrículos cerebrales
ventricular
IV ventrículo
.
Racemosa {

{
supratentorial
cisterna!
infratentorial

Mixta o generalizada

rentes y fibrosas; existe una reacción inflamatoria lares se encuentran por lo común, dilatadas (hidro­
exudativo-productiva, con exudado linfoplasrno­ cefalia); el epéndimo muestra granulaciones verru­
citario, constituyendo la clásica meningitis fibro­ gosas y los plexos coroideos se ven ingurgitados y
plástica, de predominio basal. Los espacios sub­ edematosos. Entre los casos de localización ventri­
aracnoideos y las cisternas basales están inflamados cular, predomina la del cuarto ventriculo (general­
y se observan tabicados por un magma fibroadhe­ mente un quiste único). Los vasos cerebrales, espe­
sivo. Esta aracnoiditis es la causante, en gran me­ cialmente las arterias, se afectan también por el
dida, del compromiso de los nervios craneanos, de · proceso inflamatorio; se produce una verdadera ar-
la obstrucción ,de la circulación de líquido cefalo­ teritis cisticercósica en las zonas vecinas a los quis­
rraquídeo y de la hidrocefalia secundaria. tes y también a cierta distancia de ellos. Hay una
En las formas quísticas rneningocorticales, lo proliferación del endoarterio, un espesamiento o
frecuente es la fmmación de una cápsula conjuntiva engrosamiento de.la capa elástica y una infiltración
alrededor del quiste y la producción de un exudado plasmocelular de la adventicia. El proceso de endo­
linfocitario en las meninges y espacios aracnoidales arteritis puede llevar a la oclusión del lumen del
vecinos. En esta forina quística, lo que más se com­ vaso (trombosis cisticercósica) y al reblandecimien­
promete es el parénquima cerebral, encontrándose to cerebral consecutivo de la zona afectada. El ce­
a menudo numerosos quistes, a veces con cierta rebro, corno un todo, sufre por la hipertensión en­
mayor acumulación en algunos sitios y otras veces, docraneana, por la inflamación y por la toxicidad de
diseminados; el cerebro aparece corno sembrado de los cisticercos.
vesículas amarillo-grisáceas transparentes y, cuan­ Figura 45-1. Neurocisticercosis. (A) y (B) Cisticercosis múltiple. (C) Cisticercosis racemosa de la base del cerebro.
do se efectúa un corte de cerebro, se ven como Sintornatología (D) Cisticerco único en el cuarto ventrículo. (Cortesía del Dr. R. Céspedes, Costa Rica).
sacabocados (Figura 45-1 ). Las cavidades ventricu-
Los múltiples factores que intervienen en la
y de los nervios craneanos. De este modo, los sín­ ción de parásitos e intensificación de las reacciones
neurocisticercosis, llegan a configurar un cuadro
tomas no son específicos. Cuando los síntomas y inflamatorias. No obstante la polimorfa presenta­
clínico, cuyos hechos más sobresalientes son preci­
TABLA45-2 signos no tienen sistematización clara, en un pa­ ción de esta enfermedad, los fenómenos primordia­
samente lo proteiforme, lo abigarrado y cambiante
CLASIFICACION DE LA NEUROCISTJCERCOSIS, ciente con hipertensión endocraneana, crisis les de su sintornatología pueden agruparse según la
de sus síntomas. Se presenta, en efecto, mostrando
convulsivas y deterioro mental, debería pensarse en manifestación más sobresaliente y constante, en las
SEGUN SU FORMA CLINICA diferentes facetas explicables por la combinación de
neurocisticercosis. Debe tenerse presente que GS una cuatro fonnas clínicas que dan lugar a la clasifica­
los siguientes hechos: diferentes formas biológicas
enfermedad cíclica, con episodios de agravación y ción expuesta en la Tabla 45-2. Algunos autores
l. Convulsiva de las larvas; su condición de únicas o múltiples;
sus distintas localizaciones; las diferentes reaccio­ periodos de remisión, de modo que el cuadro clínico agregan, además, una fonna apopléctica y una for­
2: Hipertensiva dependerá del momento evolutivo en que se aborde ma meningítica. Es de advertir que, en general, en
nes del huésped; la intensidad del proceso inflama­
3. Pseudotum.oral al paciente. Los episodios de agravación se suceden las etapas terminales o avanzadas de la enfermedad,
torio y el mayor o menor compromiso del parénquima
4. Demencial en el tiempo y se van haciendo cada vez más com­ existen toda clase de combinaciones entre estas for­
cerebral, de las meninges, de los vasos sanguíneos
plejos y graves; se deberían a muerte y desintegra- mas clínicas y a ellas se agregan signos y síntomas

J
PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL
39'6 397

debido al compromiso de nervios craneanos, prin­ que, a la larga, cualquier forma termina con trastor­ embargo, salvo en las formas agudas, los signos
cipalmente III, IV, VI y VIII pares y síndromes nos muy serios de la capacidad mental; pero, en meníngeos son poco llamativos o están ausentes;
piramidales, extrapiramidales y cerebelosos. algunos casos, esto es lo más llamativo y prominen­ ello se debe a la cronicidad del proceso y, corno en
te desde el comienzo. Se produce un deterioro orgá­ toda meningitis crónica, el LCR será claro.
Forma convulsiva. Las crisis convulsivas pue­ nico cerebral progresivo de curso insidioso, que
den preceder por varios años a otros síntomas y, por puede llegar hasta la demencia total, asociado fre­ Diagnóstico
lo tanto, ser ellas las únicas manifestaciones inicia- cuentemente con manifestaciones psiquiátricas. Se
les de la enfermedad. Se presentan corno ataques de inicia habitualmente con perturbaciones de memo­ Desde el punto de vista puramente clínico, el
tipo Gran Mal generalizado o Jacksonianos. No se ria, del cálculo y de la capacidad de abstracción; diagnóstico puede sospecharse y deberla plantearse,
diferencian de las crisis de la epilepsia esencial, sigue con menoscabo de la personalidad, desinhi­ en líneas generales, en las siguientes circunstan­
salvo en su aparición en sujetos mayores de veinti­ bición instintiva, desadaptación social, alteraciones cias: a) en los pacientes con crisis convulsivas que
cinco años. Ocurren más frecuentemente en las for­ de la esfera afectiva, amnesias lacunares y fabu­ aparecen después de los veinticinco años; b) en los
mas quísticas corticorneníngeas (40%) y sólo en el laciones que semejan el síndrome de Korsakoff, casos de daño orgánico cerebral, en personas jóve­
15% en los casos de localización basal. Los ataques fenómenos apráxicos, agnósicos y afásicos de diver­ nes o de edad media, con deterioro intelectual pro­
suelen repetirse con frecuencia variable y son sus­ sos tipos. En su evolución, irrumpen estados de gresivo; c) cuando existen síntomas de hipertensión
ceptibles de ser tratados con las drogas anticon­ confusión mental y de embotamiento transitorios o endocraneana, ora paroxísticos, ora lentos y, a ve­
vulsivantes de uso habitual. fluctuantes. Se injertan manifestaciones psiquiátri­ ces, imperceptibles, en los que predomina sólo una
cas: ideas delirantes, alucinaciones auditivas y vi­ cefalea crónica; d) en toda meningitis crónica; y e)
Forma hipertensiva. El síndrome de hiperten­ suales; episodios de apatía y depresión o arranques en los cuadros de obnubilación mental repetidos y
sión endocraneana es muy frecuente. En la forma de excitación psicomotora e irritabilidad, las que fluctuantes.
racemosa cisterna!, se presenta como un síndrome unidas, a veces, a ideas paranoides de grandezá, se El diagnóstico clínico debe ser completado por
subagudo o crónico, con acentuación progresiva. asemejan a lo visto en una parálisis general. Por diversos exámenes analíticos, entre los cuales se
En él se destacan la cefalea holocránea, los vómitos todos estos hechos,-es muy posible que esta forma destacan:
explosivos y el edema de papila, el cual puede pro­ sea vista más frecuentemente en establecimientos
vocar posteriormente atrofia papilar con la subse­ psiquiátricos. Alteraciones del LCR. Son características y
cuente amaurosis. Otras veces, este síndrome hi­ ayudan mucho en el diagnóstico. Se trata de un
pertensivo se presenta en forma aguda, paroxística, Síntomas asociados. Es muy frecuente que, líquido claro y a presión; las reacciones globulínicas
provocado generalmente por cambios de posición acompañando a cualquiera de las formas clínicas de Nonne Appelt y de Pandy son positivas y existe
de la cabeza, o al incorporarse desde una posición descritas, los pacientes presenten vértigos, altera­ una hiperalbuminorraquia (muy variable de un caso
de decúbito, con cefalea muy intensa y pérdida del ciones de la marcha, signos cerebelosos y pirami­ a otro), con pleocitosis de tipo linfocitario. La pre­
conocimiento, el cual se recupera, la mayoria de las dales, temblor y rigidez extrapirarnidal, alteracio­ sencia de eosinófilos en el LCR es un hecho casi
veces, en forma espontánea, pero en algunas deter­ nes de la agudeza y del campo visual, compromiso patognomónico. La reacción de ELISA en el LCR,
minadas circunstancias puede llevar a producir mixto de nervios craneanos y trastornos sensitivos. es de ayuda diagnóstica. Muy ocasionalmente, sue­
muerte súbita. En estos casos lo más probable es que Los vértigos son muy comunes; se presentan len aparecer restos de membranas del parásito en el
se trate de un cisticerco quístico único del cuatro más acusados e intensos en caso de cisticerco único LCR, con lo cual el diagnóstico se confirma.
ventrículo (Figura 45-ID). En la patogenia del sín­ del IV ventriculo, acompañados de nistagmus hori­ Figura 45-2. Cisticercosis cerebral e hidrocefalia opera­
drome hipertensivo, interviene principalmente la zontal y/o vertical y asociados con otros síntomas de La tomografía axial computarizada (TAC). da con derivación (Scanner). C= cisticerco; E= escólex;
obstrucción de la circulación del líquido cefalorra­ hipertensión endocraneana: cefalea intensa, vómi­ Con el advenimiento de este examen tan valioso V= ventrículos; Val= válvula. (Cortesía del Dr. Miguel
quídeo, ya sea causada por la aracnoiditis plástica tos explosivos y compromiso de conciencia. Estos para todos los procesos cerebrales, la neurocisti­ Casals, Chile).
basal fibroadhesiva, que determina la producción vértigos ocurren a veces en form a paroxística, cercosis puede ser diagnosticada más fácilmente,
de una hidrocefalia obstructiva, propia de las for­ despertados por cambios de posición de la cabeza. pues gracias a él, se logran visualizar las formas
mas racernosas, o por obstrucción brusca de los En algunos gasos de esta localización (IV ventriculo) quisticas, generalmente diseminadas en el parén­ con el medio de contraste y edema de vecindad; y en
forámenes de Luschka y Magendie en caso de quiste el paciente puede fallecer en forma súbita. quima cerebral (Figura 45-2). Igualmente, se obser­ etapas tardías, lo común es encontrar nódulos cal­
del cuarto ventrículo. En ocasiones suelen producirse en esta enferme­ vará el grado de hidrocefalia y el edema cerebral cificados, que corresponden a parásitos ya no via­
dad, crisis apopléticas que, en determinados casos, reaccional. Deberá efectuarse siempre con medio de bles y que se presentan corno imágenes hiperden­
Forma pseudotumoral. Las formas quísticas, pueden aparecer como la primera manifestación de �ontrast�, ya que algunos quistes pueden pasar sas. Es posible también visualizar imágenes de dis­
corticorneníngeas y parenquimatosas, tienden a veces ella. Semejan un accidente vascular cerebral con 1�advert1dos por ser isodensos, en la tomografia tinta evolución en un mismo examen (quistes hipo­
a acumularse en un sitio del encéfalo, especialmen­ ictus y hemiplejia, corno aquellos provocados por la sirnpIe. Los hallazgos que el escáner cerebral pro­ densos, con o sin anillo inflamatorio y calcificacio­
_
te en el valle Silviano y sus vecindades, dando sig­ arterioesclerosis cerebral. Se explican por la endoar­ porciona suelen ser distintos, según el momento de nes hiperdensas). Debe tenerse en cuenta que este
nos de localización, los cuales junto con crisis teritis que, al ocluir el lumen arterial, llevan al la etapa evolutiva en que se encuentra el parásito. examen, aunque es muy sugerente, no hace diag­
.convulsivas y síntomas de hipertensión endocra­ infarto cerebral. Generalmente, ocurren en perso­ Así! en estadios tempranos de la enfermedad, es nóstico de certeza. Hay otros procesos en el cerebro
neana, se asemejan en todo a un tumor cerebral. nas más jóvenes que las de.los accidentes vasculares P?s1ble observar nódulos o estructuras quísticas en que pueden dar imágenes semejantes (hongos, mi­
clásicos, lo que ayuda a diferenciarlos. diferentes localizaciones del encéfalo variables en croabcesos, metástasis, pequeños angiomas, glio­
Forma demenciat La cisticercosis es una en­ . t�rnaño y número, que se presentan cdmo imágenes mas incipientes, etc.), por lo cual los hallazgos d_el,
fermedad dernenciante, por e·l hecho de que va poco Síndrome meníngeo. La neurocisticercosis pro­ hipodensas. Cuando existe reacción inflamatoria escáner, deben correlacionarse con el cuadro clíni­
a poco alterando las funciones cerebrales; de modo voca, casi por regla general una meningitis; sin puede verse un anillo de reforzamiento periquístico co general, el LCR, las reacciones serológicas, etc.
398 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL 399

El diagnóstico sólo puede confirmarse con el estu­ ten, hoy por hoy, varias posibilidades, con muy kilo de peso dividida en dos o tres to.mas al día, escáner cerebral se ha comprobado la desaparición
dio histopatológico. buenos resultados. Las podríamos agrupar en tra­ durante 15 días. La dosis más recomendada es de 50 total de los quistes en 80 a 90% de los casos tratados
tamiento médico y tratamiento quirúrgico. En am­ mg por kilo de peso al día. Se repite el tratamiento con albendazol, mientras que con el prazicuantel se
La resonancia nuclear magnética (RNM). bos casos se puede actuar ya sea directamente sobre después de uno o dos meses si se estima necesario. alcanza un 70%. Junto con la desaparición de los
Refuerza Jo que se puede observ¡ir en la TAC. Con el parásito, destruyéndolo o extirpándolo, o bien, La droga es bien tolerada y no ha provocado efectos quistes se constata mejoría clíníca del paciente, de.
el medio de cºontraste (Gadolineo), las imágenes con medidas sintomáticas o paliativas sobre los sín­ secundarios que limiten su uso. Dada a individuos las crisis convulsivas y del estado mental. ·
observadas en la RNM son mucho más demostrati­ tomas. . sanos no produce reacciones adversas, pero en pa­ Debido a los buenos resultados obtenidos y �Ira�
vas: se puede precisar mejor el tamaño de los quis0 cientes con neurocisticercosis deberá administrarse ventajas ya expuestas, el albendazol es actualmente
tes, su estado evolutivo, la reacción inflamatoria, la Tralamiento médico con precaución ya que induce una fuerte reacción la droga de elección para el tratamiento de la
localización y de este modo, aproximarse más al inflamatoria en los quistes viables, pudiendo ser de neurocisticercosis.
diagnóstico. Es_te examen no provoca irradiación al Tratamiento médico sintomático o paliativo. riesgo cuando existe hipertensión endocraneana,
paciente por lo que se puede repetir con mayor Aquí se incluye en primer Jugar, el tratamiento puesto que se intensifica la sintomatología y puede Tratamiento quirúrgico
libertad, aunque su costo es más alto. anticonvulsivante. Como ya lo hemos dicho, las agravarse la sígnología neurológica y aumentar la
convulsiones, o como podría llamarse también, una pleocitosis del LCR. Por esto, se preconiza efectuar Procedimientos paliativos. En casó de hidroce:
Radiografía de cráneo. Puede revelar calcifi­ epilepsia secundaria, es muy habitual en esta enfer­ una cura con corticoides previa a la administración falia, tienen indicación los sistemas de derivación
caciones circulares múltiples, y señales de cisticer­ medad. Deben usarse los anticonvulsivantes con­ de prazicuantel en aquellos casos en que se observa del LCR ya sea con una válvula ventrículo-atrial o
cos calcificados; pero es un hallazgo muy poco fre­ vencionales tales como la fenitoína sódica ( en dosis en la TAC mucho edema y continuarla durante el ventrículo-perítoneal. Con estas derivativas se solu­
cuente. Es más habitual encontrar solamente signos de 100 mg 3 veces al día) o el fenobarbital (100 mL período de aplicación de este último fármaco. La ciona el síndrome de hipertensión endocraneana, lo
de hipertensión endocraneana que son inespecífi­ una o dos veces al día) o el ácido valproico (200 mg agravación que experimentan algunos paciente� con cual mejora notablemente la condición clínica del
cos: descalcificación del dorso sellar y aumento de por 2 ó 3 veces al día). eligiendo alguno de ellos· neurocisticercosis al administrárseles prazicuantel paciente. Sin embargo, estas derivativas tienen tam­
impresiones digitifonnes. La mayoria de las veces, según tolerancia y efectividad. (cefalea, náuseas y vómitos), no se debería a la bién sus problemas; es frecuente que fallen después
la radiografia· es nonnal. Para aliviar el síndrome de hipertensión endo­ intolerancia o acción directa del fámlaco, sino a la de algún tiempo por obstrucciones o disfunciones,
craneana, disminuir el edema y la inflamación, se reacción inflamatoria que se desencadena en el necesitando subsecuentes revisiones quirúrgicas o
Neumoencefalografia. Hasta hace pocos años usarán corticoides en forma oral o pa�enteral parénquima cerebral por la destrucción del parási­ recambios valvulares.
estos eran los exámenes más importantes para acer­ endovenosa si es necesario, en dosis de dexame­ to. Algunos autores consideran a esta reacción como
carst: al diagnóstico, pero hoy, con la tomografia tazona 4 a 16 mg diarios. Podría usarse también el indicadora de que el fármaco está realmente ejer­ Intervenciones neuroquirúrgicas directas. En
axial computarizada (TAC), ellos han pasado a ser manitol en algunos casos en que se observe mucho ciendo su acción parasiticida. Prazicuantel la cisticercosis del IV ventrículo está indicada la
excepcionales. Revelan habitualmente una hidroce­ edema. Los corticoides spn en general de gran uti­ (Cisticid®) se expende en tabletas de 500 mg. Para intervención quirúrgica directa con craniectomía
falia tri o cuadriventricular con bloqueo parcial o lidad; si· bien no curan la enfennedad, aminoran un individuo de 60 kilos (si se dan 50 mg por kilo de fosa posterior, exposición del IV ventrículo y
total de las cisternas basale.s. muchos de sus síntomas y no sólo disminuyen la de peso) se administrarán 6 tabletas al día (2 table­ extirp ación del quiste, el cual generalmente está
hipertensión en<;locraneana y la inflamación, sino tas· cada 8 horas ó 3 tabletas cada 12 horas). libre en esta cavidad. Con esto se puede lograr la
La angiografia cerebral. Puede mostrar altera­ que evitan en cierta cuantía la formación y/o pro­ Albendazol. Ha demostrado ser un medicamento curación definitiva del paciente, ya 'que habituaj-
ciones, pero en ningún caso son indicadores de la gresión de la leptomeningitis basal fibroadhesiva. muy eficaz para la neurocistícercosis, debido a que mente se trata de un quiste único. ·
etiología del proceso. Se trata de un examen que, en Se ha discutido si es necesario dar corticoides junto el sulfóxido, su radical activo, atraviesa fácilmente En la forma pseudotumoral, también tiene indi­
general, proporciona menos datos pertinentes de con los medicamentos parasiticídas a fin de dismi­ la barrera hematoencefálica. Por este hecho, se pue­ cación la operación directa; se pueden extraer uno
estas. enfermedades que la neun¡oencefalografia. nuir también la reacción inflamator.ia que se produ­ de usar con buen éxito no sólo en los casos de quistes o varios quistes alojados generalmente en la región
Tiene indicación de efectuarse en la fonna apo­ ce al destruirse los quistes; pero se estima que es parenquimatosos, sino también en las formas menín­ del valle silviano o en el parénquima cerebral, con­
pléctica. más conveniente darlos solamente si la reacción geas y cisternales. Tiene buena tolerancia gástrica y formando una especie de nidal envueltos en una
inflamatoria es muy intensa. Por otra parte, tam­ su costo es menor al del prazicuantel. Se usa en dosis membrana gelatinosa o aislados.
Evolución y pronóstico bién se ha argumentado que el corticoide disminuye de 15 mg por kilo de peso durante 15 días. Los quistes intraventriculares, de ventrículos
la '<oncentración plasmática del parasiticida, pero Los resultados del tratamiento con estos fárma­ laterales o del tercer ventrículo, pueden ser aborda­
La evolución de _la cisticercosis es muy variable esto no está demostrado fehacientemente. Medica­ cos pueden ser vistos y seguidos con controles de dos y extirpados por método endoscópico. La en­
e incierta. Puede penn?necer·asintomática por va­ mentos analgésicos para la cefalea y sintomáticos TAC seriados, constatándose, en muchos casos, doscopia intraventricular (o método de navegación
rios años o tener períodos de agravación y remisión. para los vómitos, pueden asociarse cuando sean reducción del tamaño de los quistes o su total des­ intraventrícular) con visualización directa a través
A veces, sigue un curso grave, agresivo, con hiper­ necesarios. aparición después de un período de dos o tres meses de una craniectomía, es actualmente un método que
tensión endocraneana y deterioro intelectual acen­ del tratamiento. Los quistes calcificados no sufren se ha agregado a la técnica neuroquirúrgica con
tuado. Las fonnas racemosas de la base son las de Tratamiento médico dirigido a la destrucción modificación con este' tratamiento por lo que no muy buen éxito en el tratamiento de estas localiza­
peor pronóstico. En general, se puede decir que la del parásito. Existen actualmente dos fánnacos que deben usarse estos medicamentos en quistes de lo­ ciones, ya que mediante ella se logra también la
neurocisticercosis es una enfem1edad grave, de cur­ han mostrado real efectividad en el tratamiento de calización ocular, quedando reservado su uso para extirp ación de los parásitos. Igualmente, el uso de
so progresivo; su tratamiento, si bien es cierto que la neurocisticercosis, especialmente de su forma los quistes parenquimatosos y las formas racemosas la estereotaxia en la erradicación de los quistes
en los últimos años ha tenido un avance muy impor­ quística parenquimatosa. Ellos son el prazicuantel cistemales o del espacio subaracnoideo. parenquimatosos, es otro procedimiento de mucha
tante, todavía no está totalmente consolidado. y el albendazol. Tienen acción parasiticida, y por Según experiencia de Sotelo, Escobedo, Del utilidad que se ha agregado, también en los últimos
ende, la curación de la enfermedad. Brutto y otros autores, el albendazol es superior al años y cada vez con mayor aceptación y requeri­
Tratamiento . Prazicuantel. Fue el primer fármaco empleado, prazicuantel en cuanto a su capacidad de destruir miento, en el tratamiento de esta parasitosis, puesto
se administra por ví_a oral en dosis que han variado los quistes en etapa viable; las estadísticas (Del que permite con presición exacta la localización de
Para el tratamiento de la neurocisticercosis exis- según los distintos autores, entre 30 y 7 5 mg por Brutto) muestran que en controles seriados de los quistes.
400 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL 401

La combinación del tratamiento médico, con Cuando se ha alojado en el cerebro, el embrión, comparada con la del hígado o la del pulmón (3%
alguno de los procedimientos quirúrgicos descritos, que mide aproximadamente 35 µm, se transforma de las hidatidosis de distribución por la sangre ar­
debería ser considerada en todos los casos. en una vesícula y se enquista. El tejido ce�ebral le terial). Su incidencia es variable según la región,
forma una cubierta glial que es la adventicia o siendo mucho más alta en los países agrícolas y en
membrana quística, quedando de este modo consti­ los ganaderos, en donde la relación perro-hombre y
HIDATIDOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO tuido el quiste hidatídico propiamente tal. Si no perro-animal (ovino y bovino) es más estrecha. Las
existe la adventicia, se podrá hablar sólo de hidátide regiones más afectadas son Australia, norte de Afri­
El sistema nervioso puede comprometerse con· o vesícula hidatídica, no de quiste. Por lo tanto, ca y Grecia; y, en Sudamérica, Uruguay y Argenti­
la larva hidatídica por su localización en el encéfa­ quistes hidatídicos del encéfalo sólo se pueden en­ na. En Chile es más frecuente en la zona sur.
lo, en los huesos craneanos o en la columna verte­ contrar en el parénquima mismo. En general, la hidatidosis afecta en forma más
bral. Mucho menos frecuente es el compromiso de La hidátide toma en el cerebro la forma macro­ habitual a los niños y a la gente joven. Tal vez esto
1
vesicular, que puede alcanzar tamaños de 10 a 12 se deba a que los niños ingieren sus alimentos con
i:
1,
los nervios periféricos.
cm de diámetro o más. La velocidad media del menos cuidado, son más reacios a las medidas hi­
HIDATIDOSIS ENCEFALICA crecimiento de la vesícula hidatídica puede ser de giénicas y, también, son más amigos de los perros,
más o menos un centímetro por año; en el niño, este con quienes juegan; además por la misma estatura,
Puede ser primaria o secundaria. La forma pri­ crecimiento puede ser más rápido. Macroscópica­ sus manos están más cerca del hocico del perro.
maria es la más frecuente. Se debe a la implantación mente, se observa una gran vesícula llena de líquido. El quiste hidatídico primario, embrional, de
directa del embrión hexacanto en el parénquima transparente, a veces con algunos grumos (vesícu­ ubicación parenquimatosa en el cerebro, es general­
cerebral. El embrión entra en el organismo por la las hijas y arenilla hidatídica) en su interior. El mente único y, además, Jo habitual es que Jo sea
vía digestiva; generalmente, desde el hocico de los cereb!'o, además de formar la adventicia, presenta cuando se encuentra sólo un quiste en el cerebro, lo
perros pasa a la mano de las personas, que con una reacción con engrosamiento del tejido glial más probable aunque no en forma absoluta, es que
frecuencia son niños; otras veces, lo hace por medio alrededor del quiste. no exista otro en el resto de la economía. Esto ocu­
de los alimentos, frutas o aguas contaminadas debi­ Cualquier área del parénquima cerebral puede rrió así en diecinueve de los veintínueve enfermos
do a las deposiciones de dicho animal. Llegado al ser asiento de quistes, pero son más frecuentes en la estudiados (65%). En cambio, cuando hay más de
intestino, atraviesa su pared y, por las ramas de la región frontotemporoparietal de cualquier hemisfe­ un quiste en el cerebro, hay mayores probabilidades
vena porta, pasa al hígado. Debe franquear el filtro rio. Es raro encontrarlos en el cerebelo. No se han de que existan también en otros órganos.
capilar de este órgano para seguir, por las venas descrito, hasta ahora, casos de ubicación en el tron­ Q.H.
suprahepáticas y la cava superior, hasta el corazón co cerebral (mesencéfalo, protuberancia y bulbo), ni Sintomatología
derecho. De aquí pasa al pulmón, donde debe atra­ en la médula espinal, ni en las meninges. General­ V.L.
vesar otro filtro capilar para volver Juego al corazón mente se sitúan en la sustancia blanca del centro La sintomatología del quiste hidatídico cerebral
izquierdo, sale de éste por la aorta y vía arteria oval, casi siempre subcorticales, Jo que favorece su se presenta con las características de un tumor, o V.L.
carótida, o con menor frecuencia por la arteria ver­ .extirpación. Ahí encuentran un sitio suficientemen­ mejor dicho, como cualquier otro proceso endocra­
tebral, llega al encéfalo. te vascularizado para su nutrición y desarrollo. Se neano que ocupa espacio. En su evolución expansiva
El largo y accidentado recorrido que debe hacer pueden encontrar también vesículas hidatídicas en va desplazando las estructuras cerebrales y, espe­
el parásito antes de llegar al cerebro, hace que ésta los ventrículos cerebrales, lo cual se explica de dos cialmente, los vasos arteriales y venosos. Como su
localización sea poco frecuente. El embrión puede maneras: porque una vesícula primaria creció muy crecimiento es lento, puede pasar algún tiempo asin­ Figura 45-3. Quiste hidatídico cerebral (Scanner). QH =
detenerse en el hígado o en el pulmón con mayor cerca de la pared ventricular y, luego, debido a la tomático, hasta adquirir gran tamaño. El conjunto quiste hidatídico; LM = desplazamiento de la línea me­
facilidad. menor resistencia del epéndimo y a la ruptura de la de síntomas y signos que provoca puede agruparse dia; VL = ventrículos laterales dilatados. (Cortesía del
La forma secundaria, denominada también me­ adventicia, se désplazó toda ella hacia el ventrículo, así: aquellos propios del síndrome de hipertensión Dr. Miguel Casals, Chile).
tastásica o escolexal, se puede producir de tres ma­ ocupando su cavidad (hi!fatidosis ventricular pri­ endocraneana y los que corresponden a su localiza­
neras: por la ruptura de un quiste hidatídico fértil maria); o porque dicha vesícula se rompió, dejando ción. Generalmente, los primeros preceden a los me cerebeloso con temblor intencional o dismetría.
ubicado en otro órgano, generalmente el ventriculo escapar las vesículas hijas al ventriculo (hidatidosis segundos y, en muchas ocasiones, estos últimos no En las últimas etapas, compromiso progresivo del
izquierdo del corazón, que provoca la diseminación ventricular secundaria). se presentan. Algunos hechos clínicos y radiológicos estado de conciencia, descontrol neurovegetatívo
de los escólices en el cerebro. También puede pro­ Lo mismo puede ocurrir en el espacio extradural, pueden orientar al médico y facilitar el diagnóstico, con fiebre alta, transpiración profusa y taquicardia
ducirse esta fonna por la ruptura espontánea·o trau­ cuando el quiste crece en la periferia, vecino a la antes de tener la evidencia anatómica. Por ejemplo, que precede al coma y al deceso.
mática de un quiste del cerebro mismo, con pasaje corteza cerebral. En estos casos no se trata de quis­ el síndrome de hipertensión endocraneana es de De los exámenes auxiliares del diagnóstico, los
de vesículas al resto del parénquima cerebral, a los tes, sino de vesículas hidatídicas desnudas, ya que larga evolución, a veces bien tolerado y llevadero, más objetívos son los radiológicos. La radiografía
ventrículos o al espacio subaracnoideo; una tercera en estos sitios no hay posibilidad de envoltura glial pero llega un momento en que se descompensa y es simple de cráneo puede mostrar signos de hiperten­
y más grave forma de la hidaddosis secundaria es la o de membrana quística. Un quiste hidatídico cere­ entonces cuando consultan los enfermos. La anam­ sión endocraneana con aumento de las impresiones
iatrogénica, que se debe a la punción de un quiste bral primario que crece vecino a la calota craneana, n�sis da datos de cefalea y vómitos explosivos; cri­ digitales, descalcifacación del dorso sellar y de la
primario, sea con el objeto de efectuar algún exa­ puede horadar el hueso, adelgazarlo, usurario y sis �onvulsivas jacksonianas o generalizadas; acor­ calota. Ocasionalmente, suelen verse calcificácio­
men radiológico, por ejemplo, la neumoventricu­ provocar un defecto óseo, sin que por esto se pueda tamiento progresivo de la visión, diplopías y afasias. nes semicirculares periquísticas las que, cuando se
lografia, o durante una intervención quirúrgica. Esta hablar de hidatidosis ósea. La hidatidosis ósea del Entre los signos están el edema papilar, que puede encuentran, son de gran ayuda.
forma secundaria es, generalmente, múltiple y, por. cránf!o tiene una morfología distinta que trataremos llegar en_ muchos casos a la atrofia óptica y a. la La tomografía axial computarizada es, sin duda,
consiguiente, bastante más grave que la forma pri­ aparte. consecu:1va ce?uera; las hemiparesias o hemiplejías; el examen que con mayor rapidez acerca al diagnós­
maria que es habitualmente única. La frecuencia de la hidatidosis cerebral es baja, las hemianops1as homónimas; la ataxia y el síndro- tico (Figura 45-3). La angiografia cerebral es el
4Q2 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOS/S DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL 403

miento de Arana y San Julián, que consiste en in­ rreno en el que le corresponde desarrollarse. No es antes al neurocirujano que al traumatólogo o al
yectar, mediante una sonda fina, suero fisiológico que se trate de otra forma biológica de hidátide, reumatólogo.
entre la adventicia y la membrana propia. A ello, se como se pensó en un tiempo, sino que a un mismo La sintornatología varia según la localización
puede agregar la indicación dada por Valladares de embrión puede desarrollarse como quiste hidatídico que tenga en la columna. En los casos de localiza­
inclinar la cabeza del paciente, como queriendo en un órgano blando, o dar lugar a microvesículas ción cervical, los síntomas radiculares son dolores
vaciar la vesícula. Todavía es posible asociar algu­ aerolares infiltrantes en el hueso. de tipo cervicobraquial y parestesias en las extremi­
nas maniobras que el anestesista puede realizar para Es muy lenta y silenciosa en su desarrollo. La dades superiores, que preceden, generalmente, al
aumentar, transitoriamente, la presión endocranea­ sintomatología se presenta sólo cuando se produce compromiso motor que se expresa por tetraparesia
na y acelerar el proceso. Deberá lavarse, enseguida, una fractura vertebral espontánea o traumática o, lo o tetraplejía. En la región dorsal, son frecuentes los
el lecho cerebral con solución de cloruro de sodio que es más frecuente, cuando el proceso sale del dolores del tipo de neuralgia intercostal, seguidos,
hipertónico, seguido de suero fisiológico. hueso e invade los tejidos blandos de la vecindad. después de un tiempo, de paraparesia o paraplejía
Los resultados operatorios son generalmente muy En la columna; lo corriente es que; al romperse la espástica. En la región lumbar, se puede presentar
buenos. A veces suele venir una hipertermia en el cortical posterior de la vértebra, la infección hida­ como un lumbago crónico con signos ciáticos uni o
Figura 45-4. Quiste hidatídico extirpado del cerebro. postoperatorio inmediato que debe tratarse con an­ tídica se propague al espacio extradural (hidatidosis bilaterales, simulando, a veces, una hernia discal,
titérmicos y medidas físicas. Es recomendable pres­ extraósea intrarraquídea, de Ivanisevich). En este para después seguir con una paraparesia o paraplejía
cribir posteriormente una terapia anticonvulsiva por espacio se acumulan las microvesículas, donde adop­ fláccida. Los síntomas sensitivos, dolores y pareste­
examen más importante; muestra, habitualmente, algunos años. tan la forma de verdaderos racimos o yacen libres. sias, preceden, a veces, por años, a los signos mo­
una zona avascular dada por el quiste, los vasos Si el quiste se ha roto durante la intervención, No atraviesan la duramadre y, por lo tanto, no se tores.
arteriales aparecen estirados y formando una espe­ nuevos quistes reaparecerán en el curso de tres a encuentran nunca en el espacio subdural, salvo que En general, la sintomatología se manifiesta con
cie de círculo alrededor de él. La gamrnagrafia o cuatro años. Sólo el control alejado de los pacientes, medie un traumatismo o una punción lumbar. No se síntomas sensitivos radiculares primero, seguido de
cintigrama cerebral, puede ser útil, pues demuestra por un período no inferior a cinco años, podrá ase­ ha descrito la existencia de hidatidosis medular. signos motores de tipo periférico o de segunda neu­
una zona de mayor concentración del radioisótopo gurar la total curación y efectividad del tratamiento. Como la ha esclarecido Devé, cuando se en­ rona, en el sitio de la compresión y de primera
en la periferia del quiste y un halo menos concen­ cuentra hidatidosis extradural, debe buscarse siem­ neurona o de compresión medular, desde el sitio de
trado en su centro. El electroencefalograma puede Tratamiento médico. En la hidatidosis del SNC pre un foco óseo vecino, ya que no se concibe la la lesión hacia abajo. En esto, el cuadro es indi­
servir de orientación. El ecoencefalograma da una se han comunicado alentadores resultados, tanto en localización primaria de la hidátide en las menin­ ferenciable clínicamente de cualquier tumor me­
desviación del eco medio. la localización raquídea como cerebral. Especial­ ges. dular, conllev.aµdo también los trastornos sensiti­
Las reacciones inmunobiológicas para la hidati­ mente remarcable es el caso de Todorov y cols., de Cuando se hace extraósea extrarraquídea, gene­ vos cordonales, las alteraciones esfinterianas y los
dosis no siempre son positivas. un paciente con quistes cerebrales múltiples tratado ralmente forma una especie de absceso osifluente cambios tróficos propios de las compresiones
con albendazol y en el cual, la TAC demostró des­ paravertebral y los tejidos vecinos le forman un.a medulares.
Tratamiento aparición de todos los quistes al término. de cuatro membrana, dentro de la cual se encuentran vesícu­
ciclos de tratamiento y a los doce meses, calcifica­ las de diferentes tamaños, mezclados con un mag­ Exámenes complementarios
'i Tratamiento quirúrgico. El mejor medio de ción de los sitios en que estaban los parásitos. ma gelatinoideo, resultante de la destrucción de
'I curación de la enfermedad es la extirp ación quirúr­ otras vesículas. La 'radiografía de columna, que es el examen lil
l;i gica del quiste, cuando es único, y de todos, cuando
son múltiples. Debe procurarse la extirp ación com­
HIDATIDOSlS
DE LA COLUMNA VERTEBRAL
Cualquier vértebra, a lo largo qe la columna,
puede ser comprometida; sin embargo, las más fre­
cual debe recurrirse primero en cualquier patología
de la columna vertebral, suele, a veces, ser negativa
!·:1
·;,_·¡
pleta del quiste, evitando por todos los medios su
ruptura, ya que cuando se trata de vesículas fértiles, Es siempre primaria. Constituye la forma más
cuentemente afectadas son las lumbares. Esto puede
deberse al mayor tamaño y a la mejor vascularización
en la hidatidosis. Sin embargo, algunos signos
radiológicos son frecuentes y sugieren la enfenne­
(,¡ se puede provocar una siembra de vesículas hijas y frecuente, del 40 al 50% de la hidatidosis ósea y el de estas vértebras. dad: 1) geodas, oquedades o imágenes areolares en
transformar la enfermedad en un mal incurable. En 2% de las formas de distribución arterial de la hi- La edad en la que con más frecuencia se da la un cuerp o vertebral; 2) deformación o ausencia de
cambio, si se logra extraer el quiste intacto y es dátide. La larva se ubica de preferencia en el cuerpo hidatidosis vertebral es de los veinte a los cuarenta un pedículo; 3) aplastamiento de un cuerp o verte­
único, el enfem10 puede considerarse curado. Por vertebral mismo o en los pedículos y, allí, toma años; es decir, la edad media de la vida. Aunque la bral; 4) sombra de partes blandas paravertebrales,
este motivo, nos atrevemos a señala.r que, en estos ciertas características morfológicas que la diferen- infección se adquiere en la infancia, los síntomas sospechosa de un absceso osifluente; y 5) conserva­
casos, debe respetarse más el quiste que el cian fundamentalmente de las que adquiere en otros demoran diez a veinte años en aparecer, lo que ción del disco intervertebral. García Capurro da
parénquima cerebral mismo durante las maniobras órganos. Es multilocular, infiltrante y osteolítica; explica la mayor incidencia en estas edades, pero mucha importancia a la alteración de los pedículos;
de extirpación (Figura 45-4). son múltiples microvesículas qesnudas que van puede encontrarse también en otras. En cambio, la lo que él ha llamado "signo del grano de café".
Con respecto a la técnica operatoria, se procede­ convirtiendo a la vértebra en una especie de panal hidatidosis cerebral es mucho más frecuente en los Como en la hidatidosis es frecuente el compromiso
rá a efectuar una craneotomía amplia. Una vez de abeja. Crece por yemación o vesiculación exógena niños. Ambos sexos tienen una incidencia semejan­ de un pedículo, falta entonces la clásica imagen de
ubicado el quiste, se desprende suavemente la ad­ y así, va infiltrando e invadiendo el tejido óseo, el te, habiendo una ligera preponderancia en la mujer. grano de café con que estos se presentan normal­
venticia y, siguiendo la técnica preconizada por cual no presenta reacción inflamatoria alguna con- mente en la proyección anteroposterior.
Dowling en 1928, debe procurarse el "parto" de la tra el parásito. Puede pasar de una vértebra a otra Sintomatología La mielografia revela una detención del medio
vesícula. Esta técnica se apoya en el hecho que la vecina, a través de contactos óseos (por ejemplo, de contraste, con imagen en pico de flauta, lo que
hidátide está a una cierta presión dentro de la ad­ apófisis articulares), sin que se comprometa.el disco Son las complicaciones neurológicas de la hida­ sugiere un proceso extradural. Este examen permite
venticia (60 a 120 mmHg) y no tiene relación de intervertebral; no es raro que, en la región dorsal, se tidosis vertebral las que dan los sintomas más pre­ hacer el diagnóstico de localización, pero no de
continuidad con ella, de modo que, al desprenderse extienda también a la ·.costilla adyacente. La larva ..,e· , .,. ..: coces y ostensibles, provocando compresiones etiología. Una detención bilobulada del medio de
de esta membrana, la larva tiene tendencia a emer­ hidatídica demuestra tener un pleomorfismo que la; radioculares y, sobre todo,. medulares. Por este he- contraste hace más sospechoso el diagnóstico de
ger. Este "parto" se puede ayudar con el procedí- hace adaptarse, como lo demostró Virchow, al te- . cho es que esta enfermedad llega, generalmente, hidatidosis.
4Q!-I PARASJTOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL SISTEMA NERVIOSO CENTRAL 405

El escáner vertebral con medio de contraste o la trabajo. Pero, desgraciadamente, estas mejorías no TOXOPLASMOSlS CONGENITA En la mayoría de los casos la encefalitis toxo­
mielo TAC y también la RNM son exámenes que son definitivas. Lo frecuente es que la enfermedad .1 plásmica se inicia en forma sutil, dificil de recono­
deben efectuarse actualmente en todo síndrome de de reproduzca después de un período variable de
meses o años, dando motivo a nuevas intervencio­ ! Sólo aproximadamente el 30% de los niños que
nacen infectados con él Toxoplasma gondii presen­
cer antes de su desenlace fatal. Aunque sus mani­
festaciones clínicas son múltiples y variadas, se
compresión medular. Con ellos se puede aproximar
nes ya que casi nunca se puede erradicar totalmente i ta síntomas en el momento del nacimiento. Sin pueden dar algunas indicaciones que ayudan en la
el diagnóstico preoperatorio al observar más de una
imagen redondeada u ovalada de naturaleza quísti­ el foco óseo. Debido al largo período asintomático ,t embargo, la gran mayoría de aquellos aparente­ sospecha diagnóstica.
ca en el canal raquídeo. del proceso, cuando llegan a aparecer los síntomas, mente asintomáticos, desarrollarán ulteriormente
El estudio de LCR no da ningún signo patog­ tiene ya bastante extensión y puede haber varias compromiso cerebral y ocular. (Véase el Capítulo Encefalopatía generalizada. Evoluciona sin
nomónico, sino que, en general, e igual que en otras vértebras comprometidas. 57: Transmisión congénita de parásitos). Las infec­ signos de focalización o compromiso específico,
compresiones medulares, revela una disociación Ivanisevich ha dicho que toda vez que se trata ciones subclínicas suelen acompañarse de un grado simulando una encefalitis metabólica. Puede evolu­
albúmino-citológica. La punción lumbar en algu­ neuroquirúrgicamente una hidatidosis vertebral, leve de encefalitis que puede ocasionar una dis­ cionar hacia un estado progresivo de coma y a la
nos casos de hidatidosis vertebral puede hacer que extrayendo las vesículas extradurales y descom­ función cerebral mínima. muerte en plazos de algunos días o dos semanas.
pequeñas vesículas pasen del espacio extradural al primiendo la médula, se está tratando sólo una com­ En los casos agudos, que son poco frecuentes, y
subdural; y, ocasionalmente, se han obtenido vesí­ plicación de la enfermedad. Si el parásito no se en los cuales predominan los síntomas de infección Encefalitis con compromiso meníngeo. Existe
culas a través de estas punciones. erradica totalmente, lo que es habitual, seguirá ade­ generalizada que compromete varios órganos (sín­ un discreto daño cerebral difuso, acompañado de
El diagnóstico de la hidatídosis vertebral es di­ lante, no habrá "recidivas", sino que el mismo pro­ drome de TORCH), puede haber cierto compromiso signos meníngeos.
fícil de hacer antes de tener la confirmación ceso que nunca curó bien, aparecerá de nuevo, dará subclínico del SNC con alteraciones leves del LCR.
histológica. Casi siempre resulta ser un hallazgo otra vez sintomatología compresiva y será necesaria Al estado inicial, sigue un cuadro de encefalitis o de Lesión masiva única o múltiple. Se caracteriza
operatorio. Generalmente, se diagnostica un tumor. una nueva operación. A través del tiempo, llegamos encefalomielitis activa, cuyos síntomas e intensidad por la presencia en el cerebro de una gran masa
En nuestra experiencia, los diagnósticos preope­ a la conclusión de que la hidatidosis vertebral es son muy variables. Pueden observarse convulsiones, necrótíca y hernorrágica, generalmente acompaña­
ratorios más frecuentes fueron: Mal de Pott, neuro­ una enfermedad eminentemente crónica, con trata­ alteraciones del tono muscular y de la conciencia, da de otros focos diseminados. En estos casos, exis­
fibroma, mielitis, hernia del núcleo pulposo, metás­ miento sólo sintomático y de pronóstico malo a hidrocefalia interna e inicio del compromiso ocular. ten signos focales evidentes y/o hipertensión endo­
tasis ósea, absceso lumbar y tumor. El diagnóstico largo plazo. Este "cáncer blanco", como lo ha lla­ Aquellos niños con síntomas del SNC evidente tie­ craneana con edema papilar, lo cual genera una
preoperatorio de la hidatidosis se hizo sólo en cua­ mado Devé, se convierte, en su localización verte­ nen muy mal pronóstico, puesto que, incluso al gran variedad de signos neurológicos: ataxia cere­
tro casos de los veintitrés de la serie estudiada. bral, en un mal incurable. Como las operaciones tratarlos, presentan casos con evolución más tórpida, bral, hemiparesia, afasia, convulsiones, compromi­
descompresivas, aunque sólo sean sintomáticas, en los cuales las manifestaciones cerebrales y ocula­ so de las raíces de los nervios espinales, parálisis
Tratamiento alivian al paciente por períodos a veces largos, so­ res se pesquisan al cabo de semanas o meses, con facial periférica, nistagmus, estrabismo y alteracio­
bre todo en las primeras operaciones, deben reali­ lesiones de tipo necrótico del SNC e hidrocefalia. nes sensoriales, además de manifestaciones psiquiá­
Debe estar dirigido a la erradicación quirúrgica zarse tantas veces como sea necesaria, sin que la La forma crónica se caracteriza por atrofia cor­ tricas.
del foco óseo y a la extirpación total de las vesículas enfermedad termine, como dice Leger, con la pa­ tical, la cual suele ser marcada, y dilatación ven­ La diversidad de los cuadros clínicos antes des­
extradurales. ciencia del neurocirujano. Es verdad que las re­ tricular por obstrucción a la circulación del LCR, critos se observan raramente en pacientes inmuno­
Como su modo de presentación es la de un tu­ operaciones se van haciendo cada vez más difíciles provocando hidrocefalia y calcificaciones múltiples. cornpetentes. En cambio, su frecuencia y graveda�
mor medular, generalmente se efectúa una larninec­ por los fenómenos de fibrosis y adherencias y los En la mayoría de los casos, la toxoplasniosis cróni­ aumenta en forma alarmante en los enfermos inrnú­
tomía. Al encontrar las vesículas, deben extraerse resultados son cada vez más difíciles, debido a esos ca se asocia al compromiso del ojo y cuando este nocomprometídos (Véase el Capítulo 59: lmimno­
todas, con el fin de poder hacer una buena des­ mismos fenómenos, y menos satisfactorios. En nues­ órgano se afecta simultáneamente con el SNC, la supresión y parasitosis).
:I compresión medular. Jamás, en estos casos, deberá tra casuística tenernos algunos casos que se han sospecha diagnóstica es muy alta. (Véase el Capítu­ Si bien la toxoplasmosis del SNC puede provo­
,:1 abrirse la duramadre. Debe buscarse el foco óseo, sometido a operaciones hasta nueve y doce veces lo 46: Parasitosis oculares). car la muerte en el lapso de algunas semanas, tam­
antes de llegar a la paraplejía definitiva. bién se describen casos que se prolongan por meses,
'I
;:: ¡
que generalmente está en las vecindades de la com­
presión medular, y hacer el raspado de la vértebra Por último, debe enfatizarse que ningún trata­
Por último, a nivel cerebral pueden ocurrir reac­
tivaciones periódicas similares a las observadas en o años, haya o no mediado tratamiento específico.
1¡ lo más completo posible, luego cauterizar los focos miento será útil, en esta enfermedad, sin dar al la toxoplasmosis ocular. Este fenómeno es debido a
óseos con solución de formol al 1 % dejándolo ac­ paciente y a sus familiares nociones esenciales so­ la ruptura de quistes de T. gondii en el tejido ner­
,,1
! tuar durante cinco minutos. También se puede usar bre la educación para la salud. La gravedad de la vioso, cuando la inmunidad celular del huésped MENINGITIS EOSINOFILICA
solución de cloruro de sodio hipertónico. En el caso enfermedad lo justifica plenamente. está deprimida.
de que toda la vértebra esté comprometida, deberá El diagnóstico clínico del compromiso nervioso En algunas helmintosis prevalentes en el Orien­
recurrirse a la extirpación de todo el cuerpo verte­ TOXOPLASMOSIS de la toxoplasmosis congénita debe acompañarse de te, se describen cuadros de meningitis eosinofilica,
bral y su reemplazo por injerto óseo o acrílico. controles serológicos, examen de LCR, radiografüi caracterizada por síntomas y signos neurológicos
La toxoplasrnosis activa es más grave y persis­ de cráneo, electroencefalograma y TAC. complejos y variados, generalmente muy graves, y
Evolución y pronóstico tente en el cerebro que en el resto del organismo, lo en los cuales el LCR revela un pleiocitosis con
cual se explicaría por el desarrollo retardado de la TOXOPLASMOSIS ADQUIRIDA eosinofilia, la cual puede también ser acompañada
Los resultados operatorios son casi siempre muy inmunidad en el tejido nervioso. El compromiso del de eosinofilia sanguínea. Estos cuadros se observan
buenos en lo que respecta a la signología neuroló­ SNC puede estar presente tanto en la toxoplasmosis El compromiso del SNC puede ser una manifes­ en la infección por Angiostrongylus cantonensis,
gica. Descomprimida la médula, cesan los dolores congénita como en la adquirida y su gravedad guar­ tación tardía de una toxoplasmosis generalizada, Gnathostoma. spi11igen1111 (véase el Capítulo 44:
y mejora la paraparesia. Lo habitual es que el pa­ da relación con el estado inmunitario del huésped. presentarse como un cuadro aislado, o bien, corres­ Otros parasitosis de los tejidos), Paragonimus sp,
ciente se restablezca desde el punto de vista motor, l'or este motivo, los más afectados son los RN y los ponder a una reactivación provocada por, inrnuno­ (véase el-Gapítulo 42: Paragonimosis) y en la cis­
sensitivo y esfinteriano. Enfermos paraparéticos pacientes inmunocomprometidos. (Véase el Capí­ supresión, corno ocurre en trasplantados de órganos ticercosis.
pueden salir d�I hospital caminando y volver a su tulo 29: Toxoplasmosis). y especialmente en pacientes con SIDA.
4()6 PARASITOLOG/A MEDICA
Capítulo46
OTRAS PARASITOSIS Diaz G, Figueredo L. Hidatidosis de la columna vertebral
DEL SISTEMA NERVIOSO y su síndrome de comprensión radícula-medular. PARASITOSIS OCULARES
Neurocirugía 1976; 34: 20-7.
La infección del sistema nervioso central produ­ Fournier JP, Marty P, Berhard C y cols. Hidatidoses
cida por otros protozoos o helmintos no provocan rachidiennes traitees pour albendazole. A propos de SAUL PASMANIK
signos ni síntomas patognomónicas. Algunas de deux observations. Pathol Biol (París) 1985;
. 33: 611-
ellas son abordadas in extenso en esta obra, como es 3.
el caso de la menigoencefalitis amibiana primaria. Gravelau PH, Henin D, Masson M y cols. Toxoplasmose
Otras infecciones pueden producir cuadros. infla­ cérébrale accquise: Trois cas anatomocliniques. Rev
matorios, degenerativos o necróticos del SNC, y Neurol (París) 1984; 140: 330-42.
cada una de ellas es tratada en los capítulos respec­ Jaroonvesema M. Differential diagnosis of eosinophilic Las infecciones parasitarias pueden producir Dado que el parásito llega a la retina durante el
tivos (Amibiasis, Malaria, Enfermedad de Chagas, meningitis. Parasitol Today 1988; 4: 262-6. procesos inflamatorios oculares de gravedad varia­ periodo fetal por transmisión transplacentaria, el
Larvas migran/es, etc.). Reishekliar V. Albendazole therapy far persisten!, solitary ble que en ocasiones, llegan hasta la pérdida de la daño ocular puede pasar desapercibido en el recién
Cyslicercus granu/osus in patients with slizures. función visual. Su frecuencia es baja dentro del nacid0. El diagnóstico en estos casos suele ser un
Neurology 1993; 43: 1238-40. contexto general de la patología parasitaria. La of­ hallazgo en el examen de fondo de ojo realizado con
BIBLIOGRAFIA Sapunar J, Gambini L. Hidatidosis vertebral con pseu­ talmopatía puede ser la única manifestación clínica ocasión de una consulta por estrabismo o mala vi­
.:1 doabceso osifluente hidatídico extra e intrarraquídeo. de la infección parasitaria, o bien, acompañar a la sión.
, Arriagada C, Nogales-Gaete J, Apt W. Neurocisticerco­ Bol Chil Parasitol 1993; 48: 18-25. sintomatología sistémica. Muchas veces, las parasi­ A la fondoscopia lo habitual es encontrar las
¡ sis. Santiago, Chile. Arrinog Ediciones, 1997. Singounas EG, Leventis AS, Sakas D y cols. Succesfull tosis oculares tienen características clínicas inespe­ lesiones cicatriciales, siendo más bien raro observar
I' 1
¡I Botero D, Castaño S. Treatment of cysticercosis with treatment of intrecerebral hydatid cysts with alben­ cíficas, por lo que debe sospecharse esta etiología el período inflamatorio agudo inicial. La lesión ocu­
1¡¡¡ prazicuantel in Colombia. Am J Trop Med Hyg 1982; dazole: case report and review ofthe literature. Neuro­ cuando las condiciones epidemiológicas así lo su­ lar más típica es el foco en roseta (Figura 46-1). Se
, ,,
31: 811-21. surgery 1992; 31: 571-4. gieren. En otras ocasiones, las lesiones son bastante trata de una lesión de ubicación generalmente ma­
11!
111 Del Brutto OH. The use of albendazole in patients with Sotelo J, Penagos P, Escobedo F, Del Brutto O. Short típicas, como es el caso de la toxoplasmosis congé­ cular, muchas veces bilateral y simétrica, caracteri­
single lesions enlanced on contras! CT. N Engl J Med course of albendazole therapy far neurocysticercosis. nita o de la cisticercosis. zada por una zona central formada por una masa
1 ¡¡ 1993; 328: 356-7. Arch Neurol 1988; 45: 1130-3. grisácea, no pigmentada, homogénea y avascular,
Del Brutto OH. Single parenquimal brain cysticercus in Takayanaqui OM, Jardim E. Therapy ofneurocisticercosis: Toxoplasmosis constituida por tejido conjuntivo y proliferación glial
1¡: the acule encephalitic phase: definition of distinct comparison between albendazole and praziquantel. y una zona periférica de atrofia coriorretinal cons­
'i ·farm of neurocysticercosis with a benign prognosis. J Arch Neurol 1992; 49: 290-4. Numerosos factores han sido descritos como tituida por una serie de alvéolos rodeados de abun­
. ¡!!_ Neurol Neurosurg Psychiatry 1995; 58: 247-9. Todorov T, Vutova K, Petrov D y cols. Albendazole causales etiológicos de uveítís, y entre ellos, la toxo­ dante acumulación P.igmentari.r. I;.l foco lesiona!
r,, Díaz G, Figueredo L. Hidatidosis cerebral. Neurocirugía treatment of multiple cerebral hydatid cysts: case plasmosis juega un papel importante. Su frecuencia aparece nítidamente delimitado ·y la retina por fuera
1973; 31: 183-88. report. Trans R Soc Trap Med Hyg 1988; 82: 150-2. varía según las diferentes áreas geográficas, entre 8 de él, se ve sana al examen clínico. El carácter
Díaz G, Schoihet S. Hidatidosis. Evaluación del trata­ Vásquez V, Sotelo J. The course of slizures af\er treatment y 25% de las uveítis. Este factor es definitivamente necrotizante de la retínitis y su ubicación macular,
miento mediante derivaiva ventrículo-atrial. Neuro­ far cereoral cysticercosis. N Engl J Med 1992; 327: más importante en las uveítis posteriores que ante­
cirµgía 1975; 33: 160-66. 696-701. riores.
El Toxop/asma gondii llega a la retina por vía
sanguínea provocando una lesión de tipo necro­
tizante con reacción inflamatoria secundaria de la
coroides. Las alteraciones oculares son más propias
de la toxoplasmosis congénita y de sus recidivas. Es
rara su aparición en la toxoplasmosis adquirida.
El daño ocular es sin duda la manifestación más
frecuente de la toxoplasmosis congénita, sea como
única expresión clínica de la infección o bien, acom­
pañando los cuadros neurológicos y sistémicos.
I' (Véase e!'capítulo 29: Toxoplasmosis). La toxoplas­
¡, mosis es una de las etiologias por considerar en las
'I
infecciones neonatales por TORCH. La infección
:,,
._·¡'¡ inicial se produce in u/ero. (Véase el capitulo 57:
1: Transmisión congénita de parásitos). La inmuni­
dad materna determina que se hayan encontrado
muy pocos casos de lesión ocular en embarazos

1
sucesivos. Sin embargo, en el sur del Brasil, se han
descrito sobre 150 familias con múltiples hermanos
con toxoplasmo_sis ocular, lo que._indicaria que en ,:;,
·esta región el daño ocular en la forma adquirida, es Figura 46-1. Toxoplasmosis ocular congénita. Fondo de
frecuente. ojo.
408 PARAS/TOLOGIA MEDICA PARASITOS/S OCULARES 409

confieren al cuadro clínico especial gravedad fun­ Sin embargo, en nuestra experiencia, la gran mayo­ Oncocercosis El daño cornea! se traduce inicialmente por focos
cional. Estas lesiones si bien son muy típicas de la ría de los casos se ha presentado con tasas altas o de queratitis punctata. Posteriormente, la invasión
toxoplasmosis, no son exclusivas de ella, pues tam­ moderadamente altas. En igual sentido se pronun­ El compromiso ocular se produce por la penetra­ de la córnea por microfilarias provoca la aparición de
bién se han descrito en algunas infecciones por cian Chee y colaboradores: estudiando títulos sero­ ción al ojo de las microfilarias de Onchocerca vol­ edema, focos de queratitis esclerosante y la eventual
citomegalovirus y en cuadros no infecciosos como lógicos para toxoplasmosis en individuos normales vulus. Se pueden afectar todas las estructuras ocu­ opacificación total con la consiguiente pérdida de
la distrofia macular autosómica dominante. y uveítis clínicamente sospechosas de toxoplasmo­ lares desde la conjuntiva hasta la retina y nervio visión. El proceso avanza desde la periferia hacia el
Es posible que muchas uveítis toxoplasmósicas sis, encontraron que el 15% de los normales tenía óptico. En países con alta prevalencia de esta infec­ centro, con la formación de un pannus fibrovascular
del adulto correspondan más bien a recidivas de tasas bajas de anticuerpos(1 : 64- 1 : 256) y el 3,8%, ción como sucede en la región del Africa Occiden­ e infiltración inflamatoria constituida principalmente
infecciones congénitas que a procesos adquiridos. tasas altas(1 : 1.024), valores que se ínvierten en las tal, constituye una causal importante de '<eguera por linfocitos y eosinófilos.
Los quistes de Toxoplasma gandii pueden perma­ uveítis, donde el 77% tenía títulos altos. La opínión ("ceguera de los ríos"). En cambio en otras zonas, El parásito puede penetrar hasta el interior del
necer en estado latente por años en las vecindades de ellos, al igual que la nuestra, sería que la tasa de como Guatemala o México, la ceguera de este ori­ ojo, observándose su presencia en el humor acuoso
de un foco retina!, hasta que en un momento dado, anticuerpos tendría importancia como factor diag­ gen es menos frecuente, ya que las infecciones son al.examinar la cámara anterior por medio de la lámpara
y por razones no bien conocidas, se rompen, provoc nóstico. poco masivas y comprometen más bien el polo an­ de hendidura. Las microfilarias aparecen como
cando una reacción inflamatoria aguda. Hay inva­ En uveítis activas en las que existen dudas res­ terior. gusanitos blancos brillantes, delgados, de 0,3 mm de
sión de tejidos vecinos por taquizoítos en multipli­ pecto a la etiologia, se puede recurrir a la punción de Frente al parásito vivo, el ojo reacciona en forma longitud. Esto se traduce por un proceso inflamato­
cación. Se desencadenan así reacciones de tipo in­ cámara anterior y determinación de anticuerpos en el muy moderada, pero cuando muere, como sucede al rio de la úvea anterior.
munitario al parásito y de tipo autoinmunitario a acuoso. Su positividad es significativa ya que indi­ iniciarse el tratamiento, se producen reacciones Puede haber también compromiso de la úvea
!i11 antígenos retinales liberados por la destrucción de la
capa de fotorreceptores.
caría producción local de anticuerpos.
La toxoplasmosis es una infección oportunista
inmunitarias graves por liberación masiva de
antígenos, con procesos inflamatorios serios, que
posterior, retina y nervio óptico, y atrofia del epitelio
pigmentario de la retina. La llegada de microfilarias al
,\ En las recidivas de cuadros congénitos es bas­ en pacientes con SIDA. Las lesiones oculares en­ pueden significar un peligro para la visión. polo posterior puede efectuarse por vía sanguínea.
,1
11 tante típica la presencia de focos de coriorretinitis contradas en estos pacientes, se consideran más La afección ocular está muy relacionada con el Se trata de cuadros graves que conducen con fre­

i
'[ que alternan con focos antiguos cicatrizados, pig­ bien de tipo adquirido que congénito reactivado, grado de infección cutánea y con la distancia de los cuencia a la ceguera.
mentados. Si bien la toxoplasmosis congénita y sus ya que por lo general, no se asocian con lesiones nódulos al ojo. En general, la sintomatología ocular El diagnóstico debe plantearse frente a lesiones

[
recidivas ocasionan una retinocoroiditis focal de cicatrizadas, pigmentadas o antiguas. Se produci­ no aparece hasta varios años después de iniciada la oculares en un individuo proveniente de zonas en­
características clínicas más o menos definidas, la rían por reactivación de una infección latente, favo­ infección. démicas que manifieste nódulos subcutáneos y eosi­
toxoplasmosis adquirida cuando afecta al ojo, pro­ recida por la inmunodeficiencia. Las causas más Se ha dividido el curso de la enfermedad en cua­ nofilia alta. La confirmación se hace por el hallazgo
1 vocá una uveítis posterior de aspecto clínico inespe­ importantes de retinocoroiditis en pacientes con tro etapas: de microfilarias en un trozo de conjuntiva o de piel
cífico. Sin embargo, los procesos tienden a ser focales SIDA son citomegalovirus, herpes y toxoplasmosis. vecina a un nódulo o por la observación directa del
:[ con reacción inflamatoria uveal secundaria de tipo Es importante diferenciar la etiología Período deincubación, quedura de 15 a 18 meses parásito nadando en la cámara anterior del ojo. De la
granulomatoso. Menos frecuente son las formas toxoplasmósica, ya que el tratamiento puede tener y en cual no hay daño ocular. tríada sintomática, oncocercomas, oncodermitis y
diseminadas. En el sur del Brasil, que es una zona hasta 80% de éxito. Se trata de una retinocoroiditis oncoftalmía, sin duda, esta última es la más grave ya
endémica de altos índices de infección toxoplas­ necrotizante focalizada, extensa, acompañada de Período de localización, donde aparecen micro­ que llega a la ceguera en 2 a 5% de los casos en zonas
mósica, parece ser que los cuadros uveales por in­ vitritis e incluso, inflamación del polo anterior. En filarias en algunas regiones del organismo, pero aún endémicas y hasta el 30% de los casos en zona�
fecciones adquiridas son muy frecuentes y constitu­ general, no hay hemorragias o éstas son muy esca­ sin compromiso ocular. hiperendémicas.
yen una de las principales etiologías de uveítis. Se sas, al revés de lo que sucede con el citomegalovirus.
han realiza.do algunos estudios que indicarían la La inmunodeficiencia hace que las pruebas Período de infección generalizada, en el que se Toxocarosis
existencia de una cierta susceptibilidad genética a la serológicas sean de poca utilidad. Hay RIFI IgG(+) producen ya alteraciones oculares y se puede de­
enfermedad toxoplasmósica. Si se evalúa el fenotipo a título bajo, atestiguando una infección primaria mostrar la presencia de microfilarias en el ojo. La infección humana con Toxocara canis o
HLA en pacientes con toxoplasmosis ocular, se ha antigua. La RIFI IgM sólo en ocasiones es positiva, Toxocara cati se traduce por dos grandes cuadros
observado un aumento significativo en el grupo HLA­ indicando una infección aguda. El estudio de Período de regresión, en que aparecen alteracio­ clínicos: compromiso visceral sistémico (larva
A29. anticuerpos en el acuoso suele no ser útil, porque nes degenerativas de los tejidos oculares afectados migrante visceral) o compromiso ocular.(Véase el
El diagnóstico de toxoplasmosis ocular se hace su positividad es sólo de alrededor del 10%. Por por la infección. capítulo 38: Larvas migran/es). El cuadro sistémico
con criterio clínico-serológico. Teóricamente el diag­ esta razón, no sería aconsejable realizar punciones Inicialmente, la enfermedad se manifiesta como es más frecuente que el ocular y, en general, ambos
nóstico definitivo requiere la demostración del pará­ de cámara anterior en pacientes con SIDA. una conjuntivitis crónica, con exacerbaciones sub­ tipos de manifestaciones no coinciden en el mismo
sito en el ojo. Como esto no es posible en la práctica, Probablemente la manifestación clínica más fre­ agudas debidas a la invasión del tejido subconjunti­ paciente. Las lesiones oculares son de aparición
se recurre a exámenes serológicos que señalan que cuente de la toxoplasmosis en el SIDA es la encefa­ val por microfilarias. La íniciación del tratamiento y mucho más tardía, lo que explica que la eosinofilia
ha habido una infección con toxoplasma. Como un litis y no la retinocoroiditis. Se la ha encontrado la muerte del parásito, suele provocar una exacerba­ suela ser normal y las reacciones de ELISA test
porcentaje alto de la población presenta anticuerpos hasta en 40% de las autopsias. Las localizaciones ción del cuadro clínico por las reacciones inmunitarias pueden ser(-) o(+) a título bajo(1 : 8).
sin haber tenido nunca manifestaciones clínicas, el cerebral y ocular estarian asociadas en el 30% de los desencadenadas por la gran liberación de antígenos. El compromiso ocular se observa de preferencia
problema se presenta en la interpretación de los casos. Finalmente, se han descrito retinocoroiditis Se observa, entonces, una conjuntivitis intensa con en niños. Los motivos de consulta más frecuente
resultados. por infección múltiple con citomegalovirus y toxo­ marcada hiperemia, quemosis y edema palpebral, y suelen ser ojo rojo por proceso inflamatorio, inala
La gran mayoría de los autores coincide en que plasma, lo que complica el diagnóstico y tratamiento. lesiones limbares semejantes a las de la conjuntivitis visión o leucocoria. Las manifestaciones clínicas
la tasa de anticuerpos no tiene valor diagnóstico, La coriorretinitis toxoplasmósica en el SIDA respon­ vernal. En ocasiones, hay lesiones de tipo flictenular son variables. Van desde un granuloma posterior o
dado que la poca capacidad.antigénica de las reac­ de rápidamente al tratamiento tradicional con con rnicrofilarias en.su interior. Al hacerce crónico el periférico en un ojo relativamente tranquilo, hasta
ciones inflam·átorias oculares, no seríá capaz de pirimetamina y sulfas. Las recidivas, sin embargo, proceso; aparece hiperpigmentación de la conjunti­ un cuadro de uveítis intensa que puede llegar a la
despertar una respuesta inmunitaria generalizada. son frecuentes. va. ptisis bulbi. La muerte del parásito implica la libe-

1
4.10 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOS/SOCULARES 411

FigÚra 46-2. Toxocarosis. (A) Fondo de ojo izquierdo: tractos fibrosos que desde la periferia bajan a la papila. (B)
Fondo de ojo derecho: típico capullo periférico, blanco nacarado, que estira una fina banda hacia la papila. (Casos de
:1 los Drs. Enrique Zenteno y Jorge Sapunar, Chile).
ii•
!¡ ¡ ración masiva de antígenos con reacción inflamato­ ELISA test(+) en el acuoso obtenido por punción de
,;: ¡ ria violenta de la úvea. cámara anterior. La eosinofilia es en general normal
ii!i El granuloma retina! es generalmente único, ubi­ en los casos oculares.
ii: cado en el polo posterior o a veces en la región El tratamiento se efectúa según la localización de
1¡: periférica, de color blanquecino, no homogéneo, la larva, empleando corticoides sistémicos,
,1,,,
Figura 46-3. Cisticercosis ocular. (A) Cisticerco observado a través del iris. (B) Extracción quirúrgica de un cisticerco
rodeado de pigmento y de pliegues retinales radia­ subtenonianos, vitrectomía, asociados o no al trata­
i, 1
del ojo. (C) Caso en que se debió enuclear el ojo.
dos (Figura 46-2). A veces, es posible percibir 1,1na miento específico con tiabendazol o albendazol. El
sombra en media luna que corresponde a la larva. tratamiento siempre es riesgoso por la amenaza la­ sible observarlo con oftalmoscopia indirecta y biomi­ El tratamiento debe estar dirigido a la extrac­
Puede acompañarse de hemorragias subretinales y tente de desprendimiento retina!, sobre todo si se croscopia. Si los medios están opacos, se puede ción quirúrgica del cisticerco (Lámina 17). Si la ubi­
neovascularización. usa exclusivamente los medicamentos antipara­ recurrir a la ecografia. El cisticerco aparece como cación es vítrea, se puede recurrir a la vitrectomia
La endoftalmitis es menos frecuente que el sitarios. Por ello, es recomendable la cuidadosa eva­ un quiste translúcido en el cual muchas veces es por pars plana. El uso de corticoides dependerá de la
granuloma. Se traduce por una leucocoria total o luación caso a caso antes de emprender el tratamíen­ posible visualizar el escólex que está animado de intensidad del cuadro inflamatorio. La administra­
parcial. Al examen, se observa una masa blanquecina to de la toxocarosis ocular. movimientos ondulatorios y de reptación que son ción de drogas o fotocoagulación para matar la larva
retrocristaliniana que puede ser confundida con un bastante característicos. no es aconsejable por la posibilidad de una marcada
retinoblastoma. Las toxinas liberadas por el parásito producen exacerbación de la reacción inflamatoria uveal.
_ Es bastante característica la presencia de surcos una uveítis de intensidad variable, con vitritis y que
Cisticercosis

fibrosos coroideos que muestran la migración que ha La cisticercosis se produce cuando el hombre en casos extremos llega a la éndoftalmitis y tennina
tenido la larva. Estas bandas fibrosas suelen actúa como hospedero intermediario en vez de defi­ con la atr�fia del globo ocular o ptisis bulbi. El
Microsporidiosis

traccionar fuertemente la mácula, desplazándola de nitivo de la Taenia solium. (Véase el capítulo 40: proceso inflamatorio es especialmente intenso y Los microsporidios son protozoos parásitos de
su ubicación original. Cisticercosis). El parásito llega al ojo por las arterias grave cuando la larva muere, debido a la brusca creciente importancia como agente oportunistas
La presentación clínica más frecuente es el ciliares posteriores y se va a ubicar en el espacio liberación de gran cantidad de antígenos. principalmente en el paciente inmunocomprometi­
granuloma periférico; más raros son la presentación subretinal, generalmente en el polo posterior o re­ El examen clínico debe completarse con un es­ do. (Véase el Capítulo 31: Microsporidiosis). A
como granuloma central y la endoftalmitis. gión macular. Ocasionalmente,.perfora la retina.y. tudio de la eosinofilia, exámenes serológicos, y la nivel del ojo, afecta el epitelio cornea! y conjuntiva!
El diagnóstico se complementa con un ELISA-­ penetra al vítreo(Figura 46°3). punción de cámara anterior para buscar eosinofilia y, ocasionalmente, los canalículos lagrimales y se­
lt,:,

test(+) a título bajo(1 : 8 ó más) y especialmente un Si los medios transparentes están claros, es po- y ELISA test(+). nos paranasales. En pacientes inmunocompetentes

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4·12 PARAS!TOLOGIA MEDICA PARASITOS!S OCULARES 413

se han descrito casos provocados por Microspori­ fico, pudiendo ser confundido con una queratitis vocar daño ocular al depositar huevos en la conjun­
dium ceylonensis y M a.fricamm, y por Vittaforma herpética o micótica. Es muy característica la discor­ tiva. Entre ellas, las más frecuentes son Oestrus
corneae. En el paciente con SIDA el principal micros­ dancia existente entre el intens.o dolor que manifiesta ovis, Musca domestica, Coclzliomyia americana y
poridio involucrado es el Encephalitozoon hel/em, el paciente y la poca magnitud de las lesiones obje­ Dermatobia hominis. Cualquiera sea el tipo de mosca
aunque también se ha descrito compromiso con­ tivas iniciales. La úlcera es de evolución tórpida, responsable, el cuadro clínico ocular es semejante.
juntival en infecciones sistémicas por Encephali­ arrastrada, y con el tiempo se observa la formación Los huevos de la mosca depositados en la con­
tozoon intestina/is. de un anillo espeso de infiltración estroma!. juntiva o en la carúncula, dete.rminan la aparición
El compromiso ocular se manifiesta por una· El diagnóstico, en general, se hace en forma tar­ de un nódulo inflamatorio con un poro respiratorio
queratitis estroma!, caracterizada por una epitelio­ día. después de haber sido tratado el paciente por a través del cual la larva saca, intennitentemente,
patla punctata gruesa y difusa. El diagnóstico se largo tiempo en forma infructuosa por su queratitis. su extremo más delgado para absorber oxígeno. El
logra mediante biopsia conjuntival. El tratamiento es En algunas series clínicas se encuentra un promedio paciente siente una sensación de movimiento den­
con fumagilina tópica y albendazol oral. de 22 semanas entre el inicio de los síntomas y el tro de la lesión que es bastante típica. Las larvas
diagnóstico etiológico. Muchas veces, el diagnósti­ vivas pueden ser extraídas de este nódulo con una
Enfermedad deChagas co se hace retrospectivo al examinar histológicamente Figura 46-4. Hidatidosis de la órbita. (Caso del Dr. pinza. La maniobra se facilita si se tapa previamen­
la córnea después de haberse practicado una Jorge Sapunar, Chile). te el poro respiratorio con ungüento para obligar a
El compromiso ocular de la enfermedad de Chagas queratoplastía. la larva a. emerger por la falta de oxígeno.
se observa tanto en el cuadro congénito como en el El tratamiento es, en general, poco efectivo y La gravedad del cuadro depende de la magnitud
adquirido. La transmisión congénita se manifiesta muchas veces termina en una queratoplastía. Las se complementa con el estudio de la eosinofilia y de la infección larval. Se puede observar desde una
o
por síntomas generales, semejante a los cuadros del drogas más efctivas parecer ser la proparnidina o pruebas serológicas. (Véase el Capítulo 36: Triqui­ pequeña irritación conjuntiva! en los casos de larva
TORCH. Las lesiones oculares no tienen un aspecto brolene, las combinaciones de neomicina-gramicidin, nosis). única, hasta la destrucción masiva del ojo y de ór­
específico. Se ponen en evidencia al examen de fon­ el clotrimazol y el baquacil (polihexametileno El cuadro ocular es de buen pronóstico y sin bita en las infecciones con múltiples larvas. Esta
do de ojo, por la presencia de edema papilar, hemo­ biguanidina). El uso de corticoides parece ser útil, mayores consecuencias en cuanto a función visual. última condición es rara y más bien propia de suje­
rragias retinales, coriorretinitis, opacidades vítreas y aunque su empleo es discutible. Se trata de un compromiso secundario dentro del tos que viven en condiciones higiénicas primitivas.
posible compromiso macular. (Láminas 25-28) El pronóstico de esta infección es, en general, cuadro general de triquinosis.
El daño ocular es más frecuente en el periodo malo. El trofozoíto libera enzimas capaces de necrozar Dusn
agudo de la enfermedad adquirida. Aparece cuando la córnea y facilitar su penetración. En las etapas Hidatidosis
la picadura de la vinchuca se produce en la cara. Los iniciales se confunde con la queratitis herpética y en La neurorretinitis difusa unilateral subaguda es
tripomastigotos invaden la piel de la órbita y conjun­ las etapas avanzadas, con la micótica. Es fundamen­ La localización intraocular del quiste hidatídico un síndrome raro producido por la migración de un
tiva y provocan la aparición del llamado complejo tal pensar en esta posibilidad etiológica para descar­ es excepcional. Algo más frecuente es la localiza­ nematodo por el espacio subretinal. Afecta de pre­
oftalmo-ganglionar o signo de Romaña-Mazza. En la tar la presencia deAcanthamoeba. Debe sospecharse ción orbitaria aunque también bastante rara, consi­ ferencia a individuo jóvenes. Se manifiesta clínica­
zona afectada se observa edema perioculary palpebral su presencia en pacientes portadores de lentes de derando el conjunto de las localizaciones de la hi­ mente por neuritis, retinitis y .vitritis. En etapas
de color violáceo y duro a la palpación, ya que no contacto con malos hábitos higiénicos. Lo ideal es datidosis. En efecto, el quiste hidatídico comprome­ tardías, se puede llegar a la pérdida de visión por
deja roseta al ser deprimido con el dedo. Hay hiperemia realizar el diagnóstico en la etapa inicial, cuando sólo te a la órbita sólo en 1 a 2% de los casos de hida­ atrofia óptica y degeneración retina!.
conjuntiva!, escasa secreción y adenopatía está comprometido el epitelio cornea! y aún no se ha tidosis.
preauricular sensible. El complejo oftalmo-ganglionar profundizado al parénquima. El cuadro clínico corresponde al de un exoftalmo
desaparece en alrededor de 4 semanas. En ocasio­ unilateral de tipo irreductible, de carácter progresi­ BIBLIOGRAFIA
nes, se acompaña de inflamación de la glándula Triquinosis vo y con dolor de intensidad variable. Esta posibi­
lagrimal. lidad etiológica se plantea dentro del conjunto de Arentsen JJ, Srur M, Eagle R, Hemández M. Queratitis
El compromiso ocular se produce durante el pe­ posibles causales de exoftalmo. Debe sospecharse por acanthamoeba. Correlación clínico-patológica.
Queratitis por Aca11t/zamoeba ríodo de migración de las larvas de Trichinel/a fyente a un paciente joven que presente un exoftalmo Arch Chil Oftal 1990; 47: 7.
spiralis y su penetración en los músculos extraocu­ blanco, de tipo tumoral, generalmente unilateral y Cochereau-Massin Y, Le Hoang P, Lautier-Frau M y cols.
1
La Acanthamoeba es un protozoo aeróbico de lares. La sintomatología ocular puede preceder a la a menudo doloroso (Figura 46-4). En ocasiones hay Ocular toxoplasmosis in human immunodeficiency
vida libre que vive en aguas contaminadas con bac­ sistémica o acompañarla. Las manifestaciones clíni­ diplopía y ptosis paralítica por compromiso del virus-infected patients. AJO 1992; 114: 130-135.
il terias o elementos orgánicos, o en corrientes de agua cas aparecen, por lo general, entre el sexto y el músculo elevador del párpado. En la mitad de los Cordero Moreno R. Manifestaciones oculares de algunas
fresca y natural. Hasta hace algunos años se consi­ vigésimo segundo dia de la infección. Los síntomas casos el quiste se encuentra en la parte superior de enfennedades tropicales. Pub. de la Secretaría de la
1
deraba que no era patógena para el hombre. (Véase son bastante característicos aunque no específicos la órbita. En ocasiones puede producir complicacio­ UCV, Caracas, Venezuela, 1993.
;¡¡, el Capítulo 33: Amibas de vida libre potencialmente y obedecerían a la miositis provocada por las lar­ nes locales ya sea de tipo ocular (glaucoma, hemo­ Holland G, Engstrom R, Glasgow B y cols. Ocular toxo­
li
patógenas). Pero en 1973 se describió uncaso de vas. rragias retinales, compromiso del nervio óptico) u plasmosis in patients with the acquired immuno­
¡I
queratitis por Acanthamoeba en un paciente porta­ Se observa edema palpebral superior de intensi­ orbitarias (inflamación, infección, compromiso deficiency syndrome. AJO 1988; l06: 653-667.
''I
dor de lentes de contacto. Desde entonces, se le ha dad variable, acompañado de inyección conjuntiva!, óseo). El diagnóstico clínico y de laboratorio será de Kruge-Leite E, Jalkh A, Quiroz H, Schepens CH.
reconocido con frecuencia creciente como factor quemosis especialmente en los ángulos externos y presunción, ya que la confirmación sólo se realiza Intraocular cysticercosis. AJO 1995; 99: 252.
·, etiológico de queratitis particularmente graves. El hemorragias subconjuntivales más o menos típicas, en el acto quirúrgico. Nussenblatt R, Mittal K, Fuhnnan S, Shanna S, Palestine
, cuadro se observa casi exclusivamente en pacientes de tipo estríado, en el territorio de las venas tempo­ A. Lymphocyte proliferative responses of patients
' portadores de lentes de contacto que usan solucio­ rales inferiores. En casos serios; pueden incluso haber Myiasis with ocuJar.toxoplasmosis to parasite retina! antigen.
•1
i\ nes de limpieza contaminadas. petequias retinales. Es típico el dolor que se obser­ AJO 1989; 107: 632.
'I En sus inicios, el cuadro clínico es poco especí- va con los movimientos oculares. El diagnóstico Diferentes tipos de moscas son capaces de pro- Sapunar J, Verdaguer J, Zenteno J, Zenteno E. Larva
!¡'I
,1

Jj.
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1
414 PARASITOLOG!A MEDICA
Capítulo47
migrans ocular por Toxocara. Análisis de 31 casos. pacientes inmunocomprometidos y con Sida. Arch
·Parasitol al Día 1989; 13: 21-33.
Smet M. Differential diagnosis of retinitis and choroiditis
Chil Oftal 1994; 46:23-9
Varga J, WolfT, Jensen J, Parmley V, Rowsey J. Combined
PARASITOSIS DEL CORAZON
in patients with acquired ímmunodeficiency syndrome. treatment of Acanthoamoeba keratitis wíth propamí­
Am J Med 1992; 92: 17-21. dine, neomycin, and polihexamathylene bíguanídíne. ARTURO ARRIBADA
Smith R. Toxoplasmic retínochoroiditis as an emergíng AJO 1993; 115: 466.
problem in AIDS patients. AJO 1988; 106: 738. Vega R, Maul E, Noemi I, De La Fuente S, Moreno E.
Thiermann E, Atías A, Larca M. Toxoplasmosis ocular en· Toxocaríasis ocular. Arch Chil Oftal 1988; 45: 15.

En algún momento de su ciclo vital, ciertos muerte brusca en América Latina. La segunda, de
parásitos pueden comprometer el corazón en forma distribución mucho más universal y de curso sola­
global o parcial. Algunos aparecen en forma acci­ pado, no ofrece una agresividad menor que la ante­
dental y esporádica; en cambio, otros producen un rior sobre este órgano. En la amibiasis se produce
daño miocárdico tan importante que representan un un cuadro de compromiso pericárdico. En la leish­
serio riesgo para la vida. En términos generales, los maniosis y en la malaria, la acción sobre el miocar­
parásitos son capaces de producir cardiopatías difu­ dio no es directa y se debe, sobre todo, a las reper­
sas dilatadas cuya consecuencia final es la insufi­ cusiones que el cuadro general tiene sobre el cora­
ciencia cardíaca congestiva, más frecuente en las zón.
infecciones provocadas por los protozoos; cuadros
de obstrucción mecánica, como ocurre en la cisti­ Enfermedad de Chagas
cercosis y en la hidatidosis, y cardiopatías focales
frecuentes en algunos casos de migraciones de for­ Constituye el cuadro más importante dentro de
mas larvales de algunos metazoos a través del mio­ las miocarditis congestivas sudamericanas. Es así
cardio. La gran prevalencia de algunas parasitosis, como en Brasil, Venezuela, Norte de Argentina y
en determinadas zonas geográficas, obliga a plan­ Uruguay, es una de las causas más frecuentes de
tear esta posibilidad en el diagnóstico diferencial de muerte brusca.
las cardiopatías de origen obscuro. En algunos ca­ Puesto que es una enfermedad sistémica que
sos, el daño se debe a la acción directa del parásito involucra diversos parénquimas, la afinidad del
o de sus productos sobre la fibra miocárdica. En Trypanosoma cruzi por la fibra miocárdica hace
ocasiones, aparecen procesos inflamatorios como que este órgano aparezca comandando el cuadro
consecuencia de fenómenos de tipo inmunitario­ sintomático, lo que ha inducido a pensar que el.
alérgico y, en otras circunstancias, el parásito, sin compromiso miocárdico es una regla en la infec�
estar presente en el corazón, actúa sobre este órgano ción. Es posible que esta selectividad se deba a
a través del cuadro general que origina en el hués­ sistemas enzimáticos diferentes que hacen más afi­
ped. nes a los tripanosomas por la fibra cardíaca o por el
Gracias a la revisión del concepto de "cardiomio­ músculo del tracto gastrointestinal. Según Miles,
patía" efectuado por la OMS, estos cuadros catalo­ habría tres tipos diferentes o zimodemas con distin­
gados hasta hace poco con este término, pasaron a ta afinidad tisular. En Chile hemos demostrado que
considerarse enfermedades específicas del músculo la mayor parte de los infectados corresponden a
cardíaco, reservando el título de "cardiomiopatía cepas con zimodemas Z2b, una menor proporción
dilatada" sólo a cuadros de etiología desconocida. por cepa Z2a y dos casos con infección selvática Z 1 •
Por esto, nos hemos referido al compromiso parasi­ Este último hecho involucra que puedan haber ca­
tario del corazón como cardiopatía difusa dilatada, sos en que el vector fue el Triatoma spi110/ai o que
cuando el daño es extenso y produce dilatación de hay posibilidad de que el Triatoma i11festans sea
la fibra miocárdica. portador de cepas Z 1 , lo que no se había demostrado
hasta ahora.
INFECCIONES En la fase aguda de la infección, los tripomasti­
PRODUCIDASPORPROTOZOOS gotos llegan a la fibra miocárdica a través de la
circulación coronaria, invadiendo con rapidez las
Estas producen un cuadro de cardiopatía difusa fibras circunvecinas, donde fonnan amastigotos, los
de tipo congestivo. Se asemejan porque el daño de cuales se dividen binariamente llegando a producir
la fibra miocárdica se produce en las etapas multi­ pseudoquistes que, al estallar, destruyen la fibra
...plicativas del parásito dentro·de Ja fibra y se perpe­ miocárdica. Los tripomastigotos así formados inva­
túa por posibles fenómenos de tipo inmunitario. La den en forma sucesiva nuevas fibras donde repiten
primera constituye una de las principales causas de el mismo proceso. Este fenómeno provoca una in-
-416 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL CORAZON 417

U:J;":Q �2 AÑus máticos: arritmia, cardiomegalia e insuficiencia 12 FEB 19'/J


ER.G 9 �/J Al�OS
.:!'}JGn
s�/q�oo cardíaca congestiva.
La evolución de la enfermedad no se diferencia
del desarrollo habitual de las cardiopatías con­
gestivas que comprenden tres fases:
- La fase inicial se inicia más o menos a los
quince días de la infección, en la cual, según el
grado de compromiso de la fibra, predominan las
arritmias, especialmente la extrasistólica. En el
examen fisico, no hay cardiomegalia y la insufi­
ciencia cardíaca aparece sólo en los casos más gra­
ves. Esta etapa, por lo general de corta duración,
pasa habitualmente inadvertida.
- La segunda etapa muchas veces es oligo­
sintomática y suele ser descubierta en un examen
preventivo de salud. Como síntomas y signos prin­
cipales, persisten las arritmias. Sin embargo, silen­
ciosamente, el volumen cardíaco ha ido aumentan­
do, lo que se demuestra mediante la telerradiografia
de tórax. Los estudios que analizan la función
ventricular· se encuentran siempre alterados. El
Figura 47-1. (A) Radiografia de tórax de una mujer de examen físico revela la aparición de un cuarto rui­
42 años, portadora de miocardiopatía crónica chagásica. do, traduciendo el aumento de la fuerza contráctil
Aumento global de la silueta cardíaca, sin morfología auricular que debe vencer una elevada presión al
específica. (B) ECG de la misma paciente de la radiogra­ final de la diástole ventricular. Habitualmente no
Figura 47-2. ECG de una paciente de 20 años con una
fi� anterior. Imagen de inactivación ventricular de la cara hay soplos, pero el segundo ruido puede escucharse,
miocardiopatia chagásica crónica que demuestra daño
lateral del ventriculo izquierdo (onda QS en DI, D2, aVL, único, por retardo de la contracción ventricular iz­
subepicárdico a nivel de la punta (V 1 ). El caso fue
V5 yV6). quierda. La duración de la segunda etapa es muy pesquisado al estudiar a esta madre, que dio a luz a un
variable y puede prolongarse hasta por diez o más niño infectado con T. cruzi.
tensa reacción inflamatoria de tipo productivo sub­ miocárdicas son reemplazadas por fibras colágenas, años.
agudo, en la que aparece un infiltrado de células hay proliferación de fibroblastos, el exudado infla- � En una tercera etapa, el cuadro es el de una
plasmáticas, macrófagos, eosinófilos y linfocitos. 1natorio va desapareciendo y quedan mios pocos insuficiencia cardíaca, generalmente de aparición ciente joven portador de arritmias y de cardiomega­
Las lesiones son originalmente perivascuiares y, elementos mononucleares del tipo de los histiocitos brusca, con una gran cardiornegalia. Aparecen blo­ lia, o en casos de insuficiencia cardíaca de origen.·
debido al edema y al infiltrado celular, constituyen y de los monocitos. Los nidos de amastigotos se queos auriculoventriculares completos, con crisis oscuro. El segundo está, a su vez, basado en. dos
una verdadera coronaritis con isquemia focal, fenó­ hacen cada vez más escasos hasta casi desaparecer, de Stokes-Adarns, bloqueos bifasciculares, y el es­ pilares imprescindibles: primero, una detallada his­
meno que explica la inversión de las ondas T en el perpetuándose las lesiones por posibles reacciones pacio Q-T está prolongado. Según nuestra expe­ toria clínica del caso, en la cual interesa averiguar
trazado del electrocardiograma (ECG). Cuando de hipersensibilidad. riencia, la aparición de fibrilación auricular, al bajar el lugar de origen o la residencia habitual del pa­
ocurre en la vecindad del pericardio, son responsa­ En el curso de años, se llega al reemplazo de aún más el débito ya reducido, es de efectos ciente y su posible contacto con triatorninos o el
bles de la aparición de ondas de daño subpericárdico. gran cantidad de miofibrillas por tejido fibroso, el deletéreos. Los estudios de la función ventricular antecedente de la enfennedad de Chagas congénita
La fibra miocárdica aparece edematosa, fragmenta­ cual, al comprometer el tejido excitoconductor, es • están muy alterados. En la auscultación, aparecen en el caso de madres jóvenes. Con frecuencia cada
da, con pérdida de la estriación, y además se produ­ responsable de la aparición de bloqueos intraven­ soplos que inducen a plantear falsos diagnósticos de vez mayor se pesquisan casos en los cuales la trans­
ce degeneración hialina. En esta etapa, la afección tricular y auriculoventriculares. El corazón aparece valvulopatías reumáticas. Es frecuente el embolismo fusión sanguínea fue causante de la infécción. En
no sólo es del miocardio, sino también de las capas dilatado, especialmente en la punta de ambos ven­ pulmonar y/o periférico con accidentes vasculares hernofilicos hemos encontrado un 8% con reaccio­
subpericárdicas y, más raramente, de las subendo­ triculos, donde se produjeron las lesiones iniciales. encefálicos, que pueden ser la primera manifesta­ nes positivas para la enfenuedad de Chagas. Por
cárdicas. Esta última es responsable de trombosis in Allí se observan ocasionalmente dilataciones aneu­ ción de la enfermedad. otra parte, no debe olvidarse que otro medio de
situ y de posibles embolias pulmonares o sistémi­ rismáticas, en las que la pared ventricular es muy Debe recordarse por otro lado, que la enferme­ adquirir la infección son los trasplantes de órganos,
cas. La extensión del proceso inflamatorio a los delgada. La intensa fibrosis, al englobar la circula­ dad de Chagas puede per se producir daño cerebral especialmente de riñón.
centros de excitoconducción explica la aparición de ción coronaria, produce la isquemia de las restantes localizado, y las muertes bruscas por bloqueo A-V El segundo elemento es el diagnóstico de labo­
arritmias, entre las que deben destacarse las migra­ fibras, explicando así la aparición de imágenes de o fibrilación ventricular. ratorio que comprende métodos parasitológicos y
ciones del marcapaso auricular y los extrasístoles necrosis y de isquemia en el ECG. Se aprecia, en Fuera de los bloqueos auriculoventriculares corno serológicos. (Véase el Capítulo 28: Enfermedad
auriculares y ventriculares. Cuando el compromiso esta etapa, una mayor tendencia a la trombosis causa de crisis de Stokes-Adarns en la enfermedad de Chagas).
inflamatorio es difuso e intenso, se produce una intramural y al embolismo periférico que en las de Chagas, se describe con una incidencia cada vez El tratamiento con drogas antiparasitarias debe
miocarditis aguda que lleva a la insuficiencia car- etapas anteriores. mayor, la enfennedad del nódulo sinusal. plantearse en aquellas etapas en que hay parásitos
. · díaca irreductible' en•.el curso de pocos días. Sin El cuadro clínico corresponde a una cardiopatía El..diagnqstico clínico debe incluir dos aspectos en la fibra miocárdica. En la actualidad, se utiliza
embargó, por hgéiiéral, el cuadro pasa a una etapa (Figuras 47-1, 47-2 y 47-3), generalmente de curso fundamentales: el diagnóstico de la cardiopatía y el el nifurtimox, en dosis de ocho a diez miligramos ' ,·
arrastrada que conduce a la cronicidad. Las fibras crónico, en la cual sobresalen tres elementos sinto- etiológico. El primero debe plantearse en todo pa- por kilo de peso, durante un período no inferior a
PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL CORAZON 419
• 418

E.RE 0"14AÑOS 1:.,.¡::,.(,. .-J•LJ.�,"., ". crónicos, son numerosas las comun.icaciones que o cuadro ganglionar, es irrelevante. Los estudios de
dan cuenta de casos de cardiopatía provocadas por la función ventricular están alterados. En uno de
6q/267J5 �r/H7!�
19 OIC 1960
: __:. : __ •:··: • __ 1 este parásito. El cuadro cardiaco puede aparecer en nuestros casos se produjo en esta etapa un
.•· !.I· .. ' .·• • el curso de una toxoplasmosis aguda generalizada, embolismo pulmonar que motivó el deceso del pa­
. L., ..: ... pero con mayor frecuencia se trata de un cuadro de ciente; en la autopsia, se encontró una cardiopatía
� cardiopatía crónica como única manifestación, y la de tipo subagudo, observándose quistes de T. gondii
Dl: OZ· más importante, como veremos más adelante. Igual en la fibra miocárdica.
que T. cruzi, el parásito tiene una marcada afinidad En la segunda etapa predominan las arritmias y

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por la fibra miocárdica, cuyo daño es de tal impor­
tancia que hace aparecer a este órgano como co­
mandando el cuadro sintomático.
aparece un dolor de tipo punzante y precordial que
es un hecho muy constante en nuestros pacientes.
Se demuestra la coincidencia de sintomatología con
Experimentalmente, se ha visto que el tipo de los períodos de actividad serológica. El volumen
las lesiones depende, en parte, de la virulencia del cardiaco está aumentado, con la aparición del terce­
parásito y de su capacidad para producir quistes. Se ro y del cuarto ruido.
describen, incluso, fenómenos de reactividad perió­ En la tercera etapa, aparece una insuficiencia
____....�. Zf. u. dica: cardíaca de curso progresivo, con soplos que en­
En la especie humana, no existe una experiencia marcan el cuadro. El volumen cardiaco se encuen­
suficiente para afirmar que ocurran reactivaciones tra muy aumentado y los estudios de la función
periódicas. Sin embargo, sobre la base de datos ventricular demuestran una fibra rniocárdica muy
experimentales y de los hallazgos patológicos espo­ dañada. Algunos pacientes llegan a la caquexia
rádicos, podemos suponer que el parásito llega a la cardíaca con una insuficiencia irreductible y con
·. P.V. . . 'U.V fibra rniocárdica por la circulación coronaria y pe­ bloqueos A-V de segundo y tercer grado. Lo mismo
·--==-,,,,,,. netra rápidamente en las fibras circunvecinas. Allí que en la enfermedad de Chagas, se puede encon­
se multiplica hasta destruir la célula parasitada, trar enfermedad del nódulo sinusal que requiere
8 originándose un foco necrótico al que afluye una implantación de marcapasos electrónicos, con los
Figura 47�3. (A) y (B) ECG de un paciente chagásico de 14 años portador de una arritmia cardiaca, caracterizada por gran cantidad de elementos inflamatorios de tipo defectos ya descritos para esa enfermedad.
migración del marcapaso auricular y extrasistolia nodal, que regresó después de tratamiento con difosfato de agudo (polinucleares). Nuevas fibras son invadidas El diagnóstico de la cardiopatía de posible etio­
primaquina. Sin embargo, diez años después, el paciente volvió a presentar arritmia, que demostró una miocardiopatía en forma sucesiva, repitiéndose el fenómeno, hasta logía toxoplásmica se basa en cinco puntos:
evolutiva. que aparecen anticuerpos inmunitarios en el hués­ a) Concordancia entre una curva serológica in­
ped, que destruyen los endozoitos ·y sólo persisten dicativa de la infección reciente y molestias cardía­
los tres meses. Los resultados pueden considerar­ En el tratamiento de la arritmia y debido al grado los· quistes. El proceso inflamatorio disminuye o cas de corta evolución.
se excelentes en las etapas I y II. Según nuestra de compromiso miocárdico, es preferible no µtilizar · · desaparece y las fibras injuriadas son reemplazadas b) Concordancia enfre la aparición de molestias
experiencia, el uso _simultáneo de corticoides, en preparados del tipo del propanolol, por su efecto por tejido fibroso. Los focos necróticos tienden a la cardíacas .periódicas y curvas serológicas co�
dosis de un miligramo por kilo de peso, ha sido útil inotrópico negativo. El empleo de marcapasos elec­ calcificación. En los casos de reactivaciones; los reactivaciones coincidentes.
en el sentido de hacer desaparecer rápidamente los trónicos aparece como la única medida en los casos quistes que se rompen dan salida a los bradizoitos, c) Concordancia entre curvas de actividad sero­
fenómenos deoidos al proceso inflamatorio local, de bloqueos A-V completos o transitorios; sin em­ provocando un proceso inflamatorio focal. En esta lógica arrastrada y deterioro cardiaco progresivo.
como los bloqueos y las arritmias graves. bargo, en algunos de nuestros casos, hemos encon­ etapa y debido a que el huésped presenta ya una d) Resultado del tratamiento, punto este último
En la fase crónica se ha utilizado con buenos tradoumbrales muy elevados (sobre ocho milivoltios), buena defensa inmunológica, no aparecen tantos que debe considerarse en conjunto con las anterio­
resultados el benznidazol en dosis de 5 a 1O mg/kg que hacían impracticable, incluso, el empleo de elec­ focos necróticos corno en la fase aguda, y el parásito res condiciones.
durante sesenta días. Es preferible la dosis de 5 mg/ trodos epicárdicos, debido a la intensa y extensa tiende más bien a la producción de quistes. En d) Recuperación de T. goiidii mediante la inocu­
kg/dia para evitar neuropatías. fibrosis miocárdica. En la actualidad, el uso de nuestra experiencia, el quiste en el tejido miocárdico lación experimental o por la demostración micros­
En la actualidad se ha precol)izado el tratamien­ marcapasos multiprogramables, co¡nputarizados, y no puede considerarse como un elemento inactivo cópica del parásito en el material de la autopsia.
to con itrakonazol antifúngico con acción tripano­ marcapasos de frecuencia regulable por el espacio como piensan otros autores. El tratamiento debe plantearse sólo cuando se
micida. Se emplea dosis de 400 mg diarios, repar­ QT, ofrecen una excelente solución a los problemas Por las razones antedichas, se configura, así, el está en presencia de cuadro con serología activa. En
tidos en 4 dosis, durante 4 meses (120 días). Los arrítmicos de la enfermedad de Chagas. cuadro de una cardiopatía crónica con reactivaciones la terapia se utiliza pirimetamina asociada con sul­
resultados muestran mejoría en el 60% de los casos, En las zonas endémicas, una apreciable canti­ esporádicas. En general, el cuadro clínico se adapta fadrogas. (Véase el Capitulo 66: Tratamiento de las
con buena tolerancia. Otra posibilidad es el empleo dad de fallecim_ientos brusco§ pueden corresponder al esquema de las tres etapas planteado para la parasilosis y tablas terapéuticas). Los periodos de
de alopurinol 600 mg diarios, también durante 4 a bloqueos A-V de esta etiología y la mortalidad, en enfermedad de Chagas; sin embargo, en ciertos tratamiento varían entre veinte y treinta días, según
meses, con iguales resultados. el curso natural de la enfermedad, debe ser elevada. casos, tiende a seguir un curso tórpido y rápido la severidad del cuadro. En aquellos casos en que la
Cuando hay insuficiencia cardiaca, el uso de hacia el deceso, guardando los periodos de agrava­ gravedad de la arritmia lo justifique, se pueden usar
digitálicos debe ser controlado en forma muy rigu­ Toxoplasmosis miento del cuadro clínico, una sugestiva concor­ corticoides en dosis de un miligramo por kilo de
rosa, por su mala tolerancia. Creemos que el uso de dancia con las reactivaciones serológicas. (Véase peso, durante unos diez días bajando luego la dosi­
dilatadores periféricos asociados a diuréticos ha . Constituye la segunda parasitosis con compro­ el Capítulo 29: Toxoplasmosis). ficación en forma progresiva. El tratamiento de la
cambiado el curso de la insuficiencia cardíaca, es­ miso cardiaco•·en orden de; importancia. Aunque En la primera etapa son características las arrit­ insuficiencia cardiaca y de las arritmias debe hacerse
pecialmente la asociación digitálicos, bloqueadores hasta el momento no hay consenso sobre el papel mias de todo tipo. No hay aumento del volumen con iguales cuidados que en la enfermedad de Cha­
i, cardiaco y el examen fisico, cuando no hay exantema gas.
de calcio y diuréticos. patogénico del Toxoplasma gondii en los casos
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420 PARAS/TOLOGIA MEDICA PARAS/TOS/S DEL CORAZON 421

Leishmaniosis ciente que enflaquece progresivamente hay conco­


mitancia de pericarditis y de daño hepático. El ECG
La Leishmania donovani no afecta la fibra mio­ mostrará las alteraciones características del compro­
cárdica por sí, aunque puede aparecer en los plas­ miso pericárdico con bajo voltaje y desnivel del
rnatocitos de los espacios intersticiales cuando se segmento ST-T sobre la línea isoeléctrica. El estu­
inocula este parásito en hárnster. En un caso huma­ dio radiológico muestra, habitualmente, una silueta
no, se encontró en el miocardio una fragmentación cardiovascular aumentada y quieta, con pérdida del
de fibras e infiltrados con polinucleares, linfocitos contorno pericardiodiafragrnático. Es característica
y plasrnatocitos cargados con leishrnanias. Sin la elevación del hemidiafragrna derecho en forma·
embargo, este hecho no es habitual en las autopsias de cúpula, que traduce la concomitancia con la le­
de los pacientes fallecidos por esta parasitosis. sión amebiana hepática.
La punción del derrame pericárdico es general­
Malaria mente aséptica; pero, en un porcentaje no despre­
ciable, da salida a un pus achocolatado que permite
Aunque en el cuadro clínico de la malaria, espe­ el diagnóstico. La punción debe efectuarse toda vez
cialmente de la provocada por Plasmodi11111fa/cipa­ que haya derrame, tanto con fines diagnósticos como
ru111, se ha descrito toda clase de síndromes cardía­ terapéuticos. Es también de utilidad la prueba tera­
cos, desde angina hasta insuficiencia cardíaca con­ péutica con ernetina que provoca la restitución ad
gestiva, no hay demostración palmaria del daño integntm del cuadro. Otros elementos diagnósticos
rniocárdico. En los casos de miocarditis, se supone útiles son las reacciones serológicas para la arnibia­
que la éausa del daño estaría en el bloqueo corona­ sis invasora.
rio debido a los eritrocitos parasitados, a los pig­ El tratamiento debe plantearse ante la sospecha
mentos y a los catabolitos. En todo caso, las lesio­ diagnóstica y previo al empleo de otras medidas
nes patológicas, consistentes en acumulaciones terapéuticas que puedan enmascarar el cuadro. El
perinucleares de grasa, y la degeneración gr¡¡sosa empleo de dehidroernetina o de clorhidrato de eme­
no. son elementos específicos de la miocarditis y, tina ha sido desplazado por el rnetronidazol debido
como establece K.ean, "no se ha demostrado en for­ a que es menos tóxico para la fibra rniocárdica y
ma fehaciente, que la malaria sea la causa de enfer­ ofrece iguales resultados. La punción pericárdica,
A
medad crónica cardíaca, excepto los hallazgos de­ corno medida terapéutica, debe efectuarse cada vez
pendientes de la prolongada anemia de la enferme­ que haya un derrame importante y que éste se repro­
dad". duca.

Amibiasis cardíaca INFECClONES


PRODUCIDAS POR HELMINTOS Figura 47-4. (A) Amibiasis cardíaca. ECG en una pa­
La afección cardíaca provocada por Entamoeba ciente con absceso hepático amibiano con vaciamiento
histo/ytica se produce sólo si exist.e arnibiasis hepá­ Los trernatodos provocan, en general, una car­ hacia el pericardio. Se aprecia bajo voltaje generalizado
tica, con el vaciamiento de los abscesos hacia la diopatía granulornatosa ocasionada por la migra­ y, en las derivaciones precordiales, signos de daño
cavidad pleural, a través del diafragma, o directa­ ción de huevos al miocardio, corno ocurre en la es­ subepicárdíco (inversión de onda T desde VI a V4). (B)
y (C) Estudio radiográfico de tórax de la misma paciente,
mente hacia el pericardio, como ocurre en los abs­ quistosornosis. En cambio, los cestodos originan
ascenso como imagen de doble contorno, debido al abs­
cesos del lóbulo izquierdo del hígado (Figura47-4). una cardiopatía de tipo mecánico, por el tamaño
ceso hepático amibíano. Aumento global de la silueta
En el corazón, sólo se ha descrito daño pericárdico, que puede alcanzar el parásito. En estos casos, la
cardíaca.
sin compromiso rniocárdico. Su frecuencia es muy, sintornatología es proteifonne y dependerá de la
rara. cavidad cardíaca comprometida. En este grupo, la
En la mayoría de los casos, los síntomas de esta parasitosis más importante es la hidatidosis, por el
pericarditis aparecen tardíamente, predominando, número de cuadros cardíacos o cardiopulrnonares que en las anteriores. Es importante recordar que la alrededor de ciento cincuenta millones de personas
durante largo tiempo, síntomas vagos tales corno la que conducen· a la incapacidad física a grupos hu­ anquilostornosis, la estrongiloidosis y la ascariasis con esquistosornosis. En la Costa de Marfil, en Afri­
pérdida de peso y un dolor epigástrico sordo y rnai manos en edad productiva. producen el síndrome de larva rnigrante visceral, ca, Bertrand describe una incidencia de un 15% de
precisado, sin relación con factores conocidos. Una Los nematodos comprenden un grupo grande de única fonna en que se produce daño cardíaco. · cardiopatía de este origen y Jaffé afirma que el48%
vez iniciada la pericarditis, los síntomas más cons­ parásitos que pueden dañar, en alguna forma, el de las muertes por miocarditis, en Venezuela, obede­
tantes son el dolor retroestemal, a veces irradiado al miocardio. Mencionaremos, en orden de importan­ Esquistosomosis ce a esta infección.
hombro izquierdo, disnea de esfuerzo y una tos cia, las siguientes: triquinosis, filariosis, estrongiloi­ El cuadro de cardiopatía se caracteriza po� la
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1,
:
pertinaz de tipo irritativo. Generalmente, se piensa dosis, ascariasis, tricocefalosis y anquilostornosis. El Schistosoma mansoni es capaz de producir en presencia de una insuficiencia cardíaca progres1� a,
en una pericarditis tuberculosa e, igual que en estos De éstas, sólo las dos primeras son capaces de pro­ el corazón dos cuadros distintos, ambos de mal la aparición de ruido de galope y de soplos func10-

li:
casos, puede llegarse al taponamiento cardíaco·en vocar cuadros difusos de cardiopatía. En el resto, el · pro1:1q�tico: cardiopatía y coi:p11lmo.nal§_c.rónico. La . _ nales,. una cardiomegalia importante y un EC? que
pocos días. daño del rniocarélio es ocasional y, en algunos casos, posibilidad de compromiso cardíaco es muy grande .. ·muestra alteraciones caracterizadas por la mver­
El cuadro debe sospecharse cuando en un pa- de tipo mecánico, aunque no menos trascendente si se piensa que, en 1963, existían en el mundo sión de la onda T, bloqueos de conducción, o bien,
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422 PARASITOLOG/11 MEDICA PARASITOSIS DEL CORAZON 423

alteraciones difusas de la repolarización. En el 12,5% aneurismas de la pared ventricular o de los grandes sas, que dependen de la ubicación del quiste en el
de los pacientes con esquistosomosis se ha descrito vasos. miocardio. Han sido descritas arritmias paroxísticas
un factor reumatoideo positivo, hecho que puede El traumatismo constante a que están someti­ y hemib�oqueos de la rama anterior izquierda; cuan­
inducir a un falso diagnóstico de cardiopatía de etio­ dos los quistes hace que su rotura sea frecuente. do el qmste compromete el tabique interventricular.
logía mesenquimática. En un 28 al 38% de todos los quistes miocárdicos, La constancia de ciertas alteraciones del ECO, en
En el miocardio, se observan pseudotubérculos la rotura ocurre hacia las cavidades cardíacas; otras casuísticas apreciables, ha inducido a algunos au­
miliares diseminados por la presencia de los hue­ veces, se produce hacia la cavidad pericárdica, con tores a considerarlas como patognomónicas: a) on­
vos de los parásitos. En los tubérculos, se aprecia la consiguiente siembra de vesículas hijas en las das R pequeñas en derivaciones precordiales que
necrosis y fragmentación de miofibrillas, degenera­ hojas de la serosa; en raras ocasiones, el proceso enfrentan el quiste; b) cambios bruscos de voltaje
ción hialinoide perifocal e infiltrados de tipo· puede culminar en una pericarditis purulenta, o una en las zonas vecinas; c) ausencia de ondas Q en
linfocitario. Las lesiones tienden a cicatrizar por fi­ pericarditis obstructiva. Cuando la rotura se hace derivaciones clásicas; d) segmento ST-T isoeléc­
brosis. Estas lesiones aparecen sólo cuando hay hacia la cavidad ventricular, pueden ocurrir distin­ trico; y e) ondas T isquémicas en la zona peri­
huevos en la fibra miocárdica y se deben a las sus­ tos fenómenos de importancia. Tal vez, el cuadro quística.
tancias líticas liberadas por el miracidio contenido más grave sea el shock anafiláctico, que puede ma­ Las pruebas inmunobiológicas para la hidatido­
en el huevo. tar al paciente en corto tiempo. Otra consecuencia sis pueden ayudar a fundamentar el diagnóstico.
Además, en la infección provocada por S. ma11- es la siembra hacia el pulmón, si lo ha hecho en el (Véase el Capítulo 39: Hidatidosis).
so11i pueden aparecer lesiones miocárdicas de tipo ventrículo derecho. La liberación de las vesículas El tratamiento es siempre quirúrgico, incluso en
degenerativo, secundarias a la anemia de esta afec­ hijas constituye un verdadero embolismo que en el los casos asintomáticos, por el peligro que presenta
ción. Cuando hay daño renal, se puede originar una pulmón puede dar origen a un cuadro de cor la posible rotura del o de los quistes presentes. Las
técnicas modernas de circulación extracorpórea
,'1
cardiopatía hipertensiva, con el cortejo sintomático pu/mona/e agudo y, en la periferia, ocasionar obs­
i'II
correspondiente. trucciones arteriales serias. permiten la ·visualización y la fácil extirpación de
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El segundo cuadro que puede originar S. ma11- El cuadro clínico de la hidatidosis cardíaca es quistes que antes eran inoperables. Los resultados
·'1

so11i es el cor pulmo11ale crónico debido a la obs­ multifacético, variando desde el caso asintomático, satisfactorios de las operaciones efectuadas con las
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trucción arteriolar pulmonar producida por los lme­ que es descubierto accidentalmente en un examen técnicas actuales, alcanzan de un 73 a un 85%, lo
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vos del parásito. La incidencia del cuadro parece de salud, hasta el cuadro polisintomático. En una que justifica ampliamente el riesgo quirúrgico.
variar de acuerdo con los factores geográficos. Es revisión de ciento cuatro casos, Heyat concluye que
así"como en el Brasil, aparece constituyendo el 5,5% sólo un 22% 1 de ellos se presenta asintomático; en
Figura 47-5. Hidatidosis del corazón con muerte súbita.

_de todas las infecciones debidas a S. ma11so11i; en cambio, en un 78% aparecen síntomas muy varia­
Triquinosis

cambio, en la Costa de Marfil, aparecería sólo en el bles, siendo los más importantes el dolor precordial El compromiso cardíaco varía, según las series
1 %. El cuadro corresponde a una endoarteritis de las de tipo punzante, la disnea de esfuerzo y el eritema estudiadas, de un 20 a un 33% en los casos agudos,
Hidatidosis

pequeñas ramas de la arteria pulmonar, con hiperten- La hidatidosis cardiaca es poco frecuente. En las cutáneo de aparición periódica. Estos eritemas, que manifestándose como una cardiopatía de tipo agu­
. sión c9nsecutiva y falla ventricular derecha. estadisti�as recientes, la incidencia de la ubicación generalmente coinciden con episodios de siembra da, que se hace evidente en los cambios evolutivos
El pronóstico de la afección cardíaca, en la es­ miocárdic'a ocupa del 0,22 a un 2% de todas las hidatídica, pueden acompañarse, en algunas ocasio­ del ECO. Afortunadamente, la mortalidad del cu·a­
quistosomosis, es sombrío, porque ambos cuadros localizaciones del parásito (Figura 47-5). nes, con crisis de pérdida transitoria de la concien- dro es baja.
conducen a la falla cardíaca y a la incapacidad físi­ El embrión hexacanto, después de pasar la cir­ cía, hecho que plantea, erróneamente alteraciones Las lesiones miocárdicas han sido observadas
ca. culación hepática y pulmonar, llega al miocardio a en la conducción auriculoventricular. entre los cinco días y las siete semanas posteriores
través de la circulación coronarla. Es posible, sin El diagnóstico debe ser sospechado en los pa­ a la infección y se deberían a la migración de las
embargo, que otra vía sea la linfática, hecho que cientes jóvenes que presentan una imagen radioló­ larvas de Trichi11ella spiralis por el tejido cardíaco.
parece tener la confirmación de los estudios recien­ gica poco clara, tienen el antecedente de residir en La larva, después de atravesar la pared intestinal,
Cisticercosis

El compromiso cardíaco provocado por el Cysti­ tes. La mayor incidencia de los quistes aparece en zona endémica, de convivir con perros y, además, llega al miocardio a través de la circulación corona­
cercus cellulosae, fonna larval de la Tae11ia solium, el espesor de la pared ventricular izquierda, lo que presentan cuadros urticariales periódicos. La radio­ ria, a partir del quinto día de la ingestión de carne
es relativamente raro. Los cisticercos aparecen en el apoyaría la hipótesis de la via coronaria, ya que es logía, el ECO y las pruebas inmunológicas son de infectada. Las alteraciones persisten, en este tejido,
i miocardio en número variable, modificando su ta­ mayor dicha circulación en este ventrículo. Al co­ alto valor diagnóstico. mientras dura la migración larval, después de lo
l.· maño desde milímetros hasta un centímetro de diá­ menzar a crecer, el quiste disgrega fibras miocár­ La radiología pennite certificar el diagnóstico cual y, a diferencia del músculo esquelético en que
¡ I
I' metro. Cuando se ubican en la pared ventricular, los dicas, las cuales, por la isquemia, se fransfonna en en el 88% de los casos, al evidenciar imágenes se produce el enquístamiento, no vuelve a aparecer
,. quistes tienden a disgregar la fibra miocárdica y un tejido fibroso que constituirá la capa adventicia redondeadas características en los bordes libres del en este órgano. Concordantemente, las lesiones
adoptan una forma elongada. En el espacio peri­ del quiste. El tamaño que alcanzan estos quistes es, corazón o de los grandes vasos. En los quistes muer­ inflamatorias regresan y desaparecen, observándo­
quístico pueden aparecer infiltrados inflamatorios, generalmente, pequeño debido a la poca disten­ tos, la calcificación múltiple del pericardio consti­ se una restitución casi ad integrum. La imposibili­
In,," lo que posiblemente dependa de la antigüedad de la sibilidad de la pared ventricular. Cuando el quiste tuye un hecho muy sugerente. Los estudios de cine­ dad de volver a encontrar las larvas, en el tejido
infección. Los quistes más antiguos tienden a la sobresale hacia una de las cavidades del corazón y ventriculografia son un complemento que debe cardíaco, ha sido interpretada como una prueba de
1

calcificación, lo que da una imagen característica a es pediculado, puede actuar como una verdadera acompañarse a la radiología simple, pues, al revelar la incapacidad del parásito para enquistarse en este
[ órgano, siendo su muerte la que ocasiona la intensa
: 1 través de los rayos X. Cuando la infección se debe válvula que ocluye el flujo sanguíneo en determina­ imágenes redondeadas en las cavidades, constitu­
¡

a pocos parásitos, el cuadro es compatible con la dos ciclos cardíacos. En este sentido, puede simular yen una valiosa referencia para el cirujano, ya que reacción inflamatoria.
vida, pero no ocurre así cuando aquélla es masiva, tumores auriculares o cardiomiopáiías obstructivas le indican el tipo de intervención
· que podrá practi- -La autopsia muestra un corazón sin un gran
pues el diagnóstico en esos casos se hace sólo a y llegar a producir muertes bruscas. En cambio, cuan­ car. aumento de volumen, con escaso contenido peri­
través de la autopsia. do sobresale hacia los bordes libres, puede simular El ECO puede presentar alteraciones muy diver- cárdico xantocrómico, en el cual puede haber lar-
424 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOS/S DEL CORAZON 425

vas. La histología revela daño de la fibra y del inters­ debidas a Wuchereria bancrofti y a Brugia ma/ayi, BIBLIOORAFIA Arribada A, Apt W, Aguilera X, Solari A y cols. Cardio­
ticio. Hay edema, hiperemia y hemorragias focales. esta relación no se ha descrito y las alteraciones patía chagásica en Chile. Cardiología lntercontinental
En la fibra miocárdica aparecen focos necróticos, miocárdicas parecen ser raras. Arribada A, Román O. Cardiomiopatías parasitarias. Rev 1993; 2:94-9.
alrededor de los cuales hay pérdida de la estriación Méd Chile 1975; 103: 189-94. Apt W, Arribada A, Arribada AM, Sandoval J, Ugarte J.
en el sarcoplasma. En el intersticio, se produce una Síndrome de larva migrante visceral Arribada A, Apt W, Utarte J, Sandoval J. Cardiopatía cha­ Cardiopatía chagásica en el valle del ria Limarí. Estudio
infiltración eosinofilica, a diferencia del músculo gásica en el valle de Elqui. Estudio epidemiológico y seroepidemiológico clinico y electrocardiográfico. Re�
estriado. Una serie de larvas de nematodos pueden loca­ electrocardiográfico. Rev Méd Chile 1979; 107: 9-15. Méd Chile 1980; 108: 203-9.
El cuadro clínico de la cardiopatía triquinósica lizarse en el corazón, al migrar por el organismo y Arribada A, Apt W. Cardiopatías Parasitarias. Ediciones Apt W, Arribada A, Ugarte J, Sandoval J, Arribada AM.
no tiene síntomas ni signos específicos. Puede pre­ pasar por el pulmón. Entre otros: Ancy/ostoma duo­ de la Universidad de Chile, Fac Medicina Sur. Edito­ Cardiopatia chagásica en la IV Región. Estudio clínico,
sentarse un dolor de tipo punzante en el precordio, dena/e, Necator americanus, Strongy/oides ster­ rial Universitaria 1980; 39-119. epidemiológico y electrocardiográfico en las localida­
palpitaciones irregulares por arritmia y, en raros coralis1 Ascaris lumbricoides, Toxocara canis y T. Arribada A, Apt W, Arribada AM, Ugarte J, Sandoval J. des de Salamanca, Combarbalá e !llapel. Rev Méd
casos, galope y síntomas de falla ventricular. La cati. La causa más frecuente del síndrome es la Cardiopatía chágasica en la provincia de Chañaral. Rev Chile 198 I; l09: 197-205.
ayuda más importante para el clínico es el ECO, infección del hombre con los huevos del áscaris del Méd Chile 1980; 108: 1118-24. Apt W, Arribada A, Aguilera X, Sandoval J. Chagas
que demuestra alteraciones evolutivas de distinto perro y del gato, T. canis y T. cati. Estas infeccio­ Arribada A, Apt W, Arribada AM, Ugarte J, Sandoval J. cardiopathy and T,ypanosoma cruzi zymodems in
tipo: arritmia extrasistólica, bloqueos A-V varia­ nes son frecuentes en los niños que juegan con Epidemiología de la cardiopatia chagásica en Chile. Rev Chile. Bull Pain Am Health Organ 1987; 21: 358-68.
bles de 1 º a 2º grados e isquemia. El estudio radio­ tierra donde hay deyecciones de perros o de gatos Méd Chile 198 I; 109: 1199-1207. Apt W, Arribada A, Sagua J, Arribada AM, Sandoval J.
lógico demuestra un corazón de tamaño normal o infectados. (Véase el Capítulo 38: Larvas migran­ Arribada A, Apt W, Ugarte J. Historia natural de la Cardiopatía chagásica en el altiplano chileno. Rev
poco aumentado. Los hallazgos anteriores, unidos /es). cardiopatia chagásica en Chile. Bol Of Sanit Panam Méd Chile 1987; 115: 616-23
al resto del cuadro clínico, la eosinofilia y las prue­ La larva llega a distintos órganos, después de 1987; 102: 49-73. Apt W, Aguilera X, Arribada A, Pérez C y cols. Trata­
bas inmunobiológicas (véase el Capítulo 36: Triqui­ atravesar la barrera capilar pulmonar. Llega al co­ Arribada A, Apt W, Ugarte J. Historia natural de la miento de la enfermedad de Cha gas humana crónica con
nosis), hacen posible establecer el diagnóstico de razón, a través de la circulación coronaria, produ­ cardiopatía chagásica en Chile. Bull Pam Am Health itrakonazol y alopurinol. lnforrne preliminar. Rev Méd
cardiopatía provocada por T. spiralis. El uso de ciendo un daño granulomatoso con necrosis focal y Organ 1986; 20: 245-66. Chile 1994; 122:420-7.
corticoides marcó un cambio espectacular en el una intensa reacción inflamatoria sobre la base de
pronóstico de la cardiopatía triquinósica, la cual fagocitos y de eosinófilos. Este infiltrado eosinófilo
frecuentemente era mortal. El uso de cortico­ es el que le da carácter propio a la inflamación,
esteroides produce un alivio rápido del cuadro clí­ puesto que pueden apreciarse múltiples granulomas
nico y una mejoría evidente en el trazado del ECO. eosinofilicos al recorrer la preparación.
La persistencia de la onda T isquémica ha sido El cuadro clínico debe sospecharse, esencial­
interpretada como un factor de mal pronóstico. mente, en los niños que presentan algunas de las
siguientes manifestaciones: hepatomegalia,
Filariosis esplenomegalia, fiebre, neumonitis intersticial, asma
bronquial, signos de encefalitis, alteraciones visua­
Existen pocas referencias de afección cardíaca les, cardioinegalia o arritmia, asociadas a una hipér­
producida por las formas adultas de las filiarías; sin gamaglobulinemia o a una eosinofilia. (Véase el Ca­
embargo, se han descrito verdaderos abscesos en las pítulo 38: Larvas migran/es).
cavidades cardíacas, en los grandes vasos e, inclu­ El cuadro cardíaco puede ser larvado, o bien
so, en las cavidades cardíacas producidos por adoptar las características de una descompensación
Dirofi/aria spp, Mansonel/a perstans y Dracuncu­ brusca que hace pensar, generalmente, en una cardi­
i
lus medinesis. En cambio, las fonnas larvales son tis reumática, afección con la que debe hacerse, en
capaces de producir cuadros de cardiopatías focales forma habitual, el diagnóstico diferencial.
I:
caracterizados por la acumulación de linfocitos, en El ECO y el estudio radiológico son fundamen­
especial de eosinófilos, alrededor de las larvas y tales para el diagnóstico del compromiso cardíaco.
1 por focos de necrosis de las fibras miocárdicas. En El pronóstico es relativamente bueno, pues has­
¡¡,, ciertas áreas geográficas donde la filariosis cons­ ta el momento no se ha demostrado perpetuación de

i!
tituye un problema serio, como en el Africa ecua­ los cuadros cardíacos y los cuadros graves regresan
torial, se ha observado una sugestiva coincidencia con la terapia instaurada en forma oportuna.
l\>
(90%) entre esta parasitosis y la presencia de fibrosis
¡¡:
endomiocárdica, un tipo de cardiomiopatía que con­ Tricocefalosis
duce a la insuficiencia cardíaca por fallas en la
¡i distensibilidad de la fibra miocárdica. En Europa, el Las alteraciones del corazón descritas en la
1¡·!·,¡ antecedente de una filariosis adquirida en Africa tricocefalosis masiva, con cardiomegalia y degene­
ecuatorial aparece en un alto número de pacientes ración cérea, se han interpretado como secundarias
i.
¡1!:
11
.1 con fibrosis endomiocárdica. a la anemia severa de estos casos y no a la acción
En otras áreas geográficas como Malasia, Indo­ directa del parásito. (Véase el Capítulo 4: Pato/o-·
li. 1 nesia y China, donde predominan las infecciones gía general de las parasitosis).
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Capítulo48 PARASITOSIS DEl PUlMON 427

PARASITOSIS DEL PULMON bronquios (hígado, bazo). La biliptisis es una evi­


dencia de un quiste hidatídico hepático abierto a
los bronquios y comunicado también con la vía bi­
JORGE SAPUNAR liar.

Sintomatología
,i Los quistes hidatídicos pulmonares no compli­
cados permanecen asintomáticos y muchas veces
Habitualmente los parásitos llegan al pulmón res generalmente son casi esféricas y sus tamaños se descubren como un hallazgo radiológico. En el
por la circulación sanguínea, en otros casos pasan están en relación con la edad del parásito. Habitual­ origen de los síntomas intervienen el trauma, la
al pulmón desde el abdomen a través del diafragma, mente los síntomas comienzan cuando el quiste infección y la hipersensibilidad. Los síntomas más
otras veces penetran al aparato respiratorio por vía alcanza 5 a 6,cm de diámetro, es decir, cuando tiene comunes son tos, expectoración, hemoptisis,
linfática y, finalmente, algunos ingresan por vía una evolución de por lo menos 6 años. En el adulto hidatoptisis y el dolor torácico. Aparecen antes en
,! aérea. el quiste, aún de gran tamaño, no deforma el tórax los quistes centrales que en los periféricos por el
I'
:i Los parásitos pueden estar temporalmente en el
pulmón o bien pennanecer en él, originando sínto­
ni orada las costillas.
El quiste hidatídico puede ser central (intrapul­
más rápido contacto con los bronquios, vasos y
nervios.
mas de variable intensidad que simulan otras enfer­ monar) o periférico (emergente) cuando fonna re­ La hemoptisis suele acompañar a las hidátides
medades, poniendo a prueba la habilidad del médi­ lieve en la superficie del pulmón. abiertas a los bronquios, siendo dominante en el
,1 co y obligándole a indicar diferentes exámenes para Los quistes del pulmón son más frecuentes en quiste hidatídico con membranas retenidas. Las
llegar al diagnóstico. los lóbulos inferiores, especialmente en el pulmón hemoptisis pueden ser mínimas o llegar a ser fata­
derecho. La mayoría de los pacientes tienen sola­ les.
1 HIDATIDOSIS mente un quiste. La hidatidosis múltiple puede ser
primitiva o secundaria. La múltiple primitiva es
El dolor torácico tiene caracteres variables. Es
casi constante, aunque leve, en los quistes pulmo­
El quiste hidatídico pulmonar tiene característi­ rara, se produce por la llegada al pulmón de varios nares periféricos que comprometen la pleura. Ex­
Figura 48-1. Radiografia de un quiste hidatídico pulmonar
cas ,especiales por la anatomía y fisiología tan pro­ embriones hexacantos y la secundaria se origina cepcionalmente, provocan dolor los quistes centra­
no complicado.
pias de este órgano. El denso árbol bronquial y por siembra de escólices. En la práctica la hidatido­ les.
vascular favorecen algunas complicaciones del quis­ sis múltiple generalmente es secundaria. Habitualmente la hidatoptisis es manifestación
te. Los cambios de presión en los bronquios y en el Las hidátides pulmonares en el hombre habi­ tardía de la afección. Puede ser lenta, fraccionada o
tórax acentuados por la tos, explican algunas carac­ tualmente no tienen vesículas hijas, son acefalo­ a veces brusca, pero, generalmente, es incompleta y El signo del doble arco. Si el aire aumenta, se
terísticas de esta localización. quistes, es decir, son estériles. persiste por meses y aun años; la hidatoptisis es compromete la vitalidad de la hidátide y se fisuran las
La hidatidosis pulmonar puede ser primitiva o patognomónica de hidatidosis. membranas parasitarias, se pierde líquido y entra aire
secundaria. La primitiva, que es la más frecuente, Rotura del quiste hidatídico pulmonar. Al a la hidátide, apareciendo un aspecto radiológicb
resulta de la ingesta de huevos de Echinococcus crecer el quiste se contacta con los bronquios, los Diagnóstico llamado "imagen del doble arco".
granulosus, luego el embrión hexacanto por vía altera, se rompe y las membranas parasitarias pe El signo del camalote. Es un grado más acentua­
porta pasa al hígado y por las venas suprahepáticas netran en los bronquios originando una hidatoptisis Los antecedentes epidemiológicos más los sín­ do que el anterior. Las membranas ahora caen y
a la cava inferior, corazón derecho y finalmente brusca o lenta, que puede producir sintomatología tomas exigen el estudio del tórax por imágenes, el flotan sobre el líquido hidatídico, originando en la
llega al pulmón en donde origina una hidátide. La local o generalizada de intensidad variable. En un examen de la expectoración o vómica y el empleo de radiografia una línea horizontal ondulada en el inte­
hid,atidosis secundaria se produce por el desarrollo 5% de los casos se puede retener membranas en la reacciones inmunobiológicas. rior del quiste.
en el pulmón de escólices provenientes de una hidá­ cavidad residual constituyéndose el cuadro de Membrana encarcelada o signo de la sombra
tide primitiva a través de los siguientes mecanis­ "membranas encarceladas o retenidas". La adventi­ Estudio por imágenes poligonal. El líquido ha sido evacuado totalmente a
mos: a) consecutiva a una vómica o a una interven­ cia tiene poca tendencia al colapso debido a la in­ los bronquios quedando las membranas parasitarias
ción quirúrgica; b) ruptura de un quiste hidatídico fección secundaria, a la epitelización y a la insufla­ Radiología(Figuras48-1 y48-2). En la radiografia secas dentro de la adventicia. Este signo radiológico
cardíaco o hepático (hidatidosis metastásica); y c) ción de la cavidad. La calcificación de la adventicia de tórax se puede encontrar: es evidente en radiografias laterales del tórax; en
i! siembra bronquial (secundaria broncógena).
Siempre se ha discutido si la localización hepá­
en los quistes pulmonares no se produce o es excep­
cional. La hidátide en el pulmón puede originar bron­
El signo de la muesca. Se presenta en el 10% de
los quistes pulmonares no complicados y se consi­
radiografias anteroposteriores la imagen se ve más o
menos redondeada y en las laterales u oblicuas, es
tica o pulmonar es más frecuente, pero el hecho quiectasias, atelectasias, supuración pulmonar, es­ dera muy sugerente de la parasitosis. La imagen irregularmente poligonal.
práctico es que ambas localizaciones juntas consti­ clerosis pleuropulmonar y secuelas cavilarías. redondeada presenta en su contorno una ligera de­ Las imágenes radiológicas descritas no son
tuyen el 86% del total de los quistes hidatídicos. La presión, constituyendo el signo de la muesca. patognomónicas. Las imágenes redondeadas son
localización pulmonar puede coexistir con otras Hidatidosis extrapulmonar abierta a los bron­ El signo de la neumooperiquística. Nombre in­ sugerentes. Las de los quistes complicados se con­
localizaciones, especialmente con la hepática, por quios. La expectoración de vesículas hijas debe ha­ correcto puesto que debería llamarse signo de la sideran más características.
ello siempre debe descartarse esta asociación. cer sospechar que no se trata de un quiste hidatídi­ neumoperivesicular. Se produce por la penetración
El quiste hidatídico pulmonar tiene larga evolu­ co pulmonar, porque éstos excepcionalmente son de aire entre la hidátide y la adventicia que está Tomografia axial computarizada de tórax (TAC)
ción, pero se complica y-manifiesta clínicamente·' multivesiculares. El estudio' de laboratorio puede abierta a los bronquios. En las radiografías aparece y resonancia nuclear magnética. Son útiles para
antes que en otros órganos. Las hidátides pulmona- evidenciar la localización extrapulmonar abierta a los como un espacio claro de, aire entre dos sombras diferenciar una colección líquida de un tumor Y para
lineales de bordes netos. estudiar el pulmón oculto por un derrame.
428 PARASITOLOGIA MEDICA PARAS/TOS!S DEL PULMON 429

AMIBIASIS PARAGONIMOSIS

La amibiasis extraintestinal es secundaria a la La localización pulmonar de Parago11i11111s sp o


localización primaria en el colon, aunque ésta pase paragonimosis pulmonar se denomina también he­
inadvertida clínicamente. Un elevado porcentaje de moptisis parasitaria o distomatosis pulmonar.
las infecciones extraintestinales asientan en el hí­ El hombre contrae esta afección al comer crus­
gado; después le sigue en orden de frecuencia, la táceos de río (cangrejos o langostinos) crudos o
ubicación pleuropulmonar. Esta se origina general­ insuficientemente cocidos con metacercarias enquis­
mente por una propagación de un absceso hepático tadas de Paragonimus sp. Ingeridas las metacerca­
amibiano, pero es posible una colonización directa rias salen de los quistes, cruzan la pared intestinal
del colon por vía hemática sin localización hepáti­ y por la cavidad peritoneal llegan al diafragma, lo
ca. atraviesan al igual que la pleura y penetran en los
En México las complicaciones torácicas apare­ pulmones llegando a los bronquios y se transforman
cen en un 15 a 20% de los abscesos hepáticos en vermes adultos que son enquistados por los teji­
2 amibianos. dos del hospedero. Sus huevos se eliminan con la
En el tipo más común de amibiasis pleuropulmar, tos o son deglutidos apareciendo en las heces a los
es decir, la consecutiva a la propagación de un dos a tres meses después de la infección. (Véase
absceso hepático a través del diafragma, los sínto­ Capítulo 42: Paragonimosis).
mas principales son un dolor intenso, permanente, En el pulmón los quistes, en cantidad no superi­
en la base torácica derecha, debido al compromiso or a diez, se presentan como fonnaciones de color
de la pleura diafragmática, con tos seca persistente. rojo oscuro o café que persisten a veces durante
Roto a los bronquios, se provoca una fistula hepa­ años.
tobronquial dando una expectoración achocolatada En infecciones con pocos parásitos existen le­
característica, disnea intensa si el proceso es exten­ siones localizadas, mientras que en infecciones
so y junto con esto, existe el síndrome de absceso masivas pueden comprometerse otros órganos y en
hepático. el puhnón se observan lesiones severas. El pulmón
En caso de absceso pulmonar primario por inva­ reacciona ante el parásito, ante sus huevos y ante los
sión hematógena directa desde el colon, falta el exudados originándose inflamación y fibrosis. La
compromiso hepático y pleural. muerte y desintegración de vermes y huevos en
Otras veces el absceso hepático amibiano pro­ infecciones antiguas causan reacciones tisulares
voca una pleuritis diafragmática, originando un duraderas. Por infección bacteriana secundaria de
derrame pleural derecho con líquido pleural sero­ las lesiones puede sobrevenir supuración y ulcera­
sanguinolento y si el absceso se rompe a la pleura, ciones.
el líquido toma aspecto achocolatado. El derrame Los helmintos originan en los tejidos una infil­
serofibrinoso es la complicación más común. Se tración leucocitaria, hemorragia y desarrollo de te­
Figura 49-2. Imágenes radiológicas del quiste hidatídico pulmonar. (!) Quiste no complicado. (2) Imagen presenta dolor irradiado al hombro, disnea, tos jido fibroso que les fonnan una pared quística. Es­
neumoperiquistica. (3) Imagen en doble arco. (4) Imagen en camalote. seca que exacerba el dolor. La radiografía de tórax tos quistes tienen unos 2 a 3 cm de diámetro, son
confirma el derrame y la toracocentesis, su naturale­ duros y la mayoría están ubicadas en la profundidad
za. de los tejidos. Alrededor de los quistes antiguos no
Ecotomografia torácica. Sirve para estudiar imá­ Estudio de expectoración o vómica La ruptura hacia los bronquios sigue en frecuen­ existe inflamación. En la superficie del pulmón se
genes radiológicas de dificil interpretación, sobre cia. El síntoma característico es la vómica acho­ pueden ver quistes de color parduzco que contienen
todo cuando las radiografías no evidencian si son Debe ser macro y microscópico. Se pueden en­ colatada que alivia los síntomas del absceso hepá­ líquido sanguinolento, exudado purulento y a veces,
líquidas o sólidas, para conocer la relación con el contrar membranas, vesículas, escólices y ganchi­ tico. En la radiografia de tórax se aprecia elevación parásitos adultos vivos o muertos; al examen mi­
diafragma y órganos del abdomen superior, asi se tos. Sin embargo, el hallazgo de escólices y ganchi­ del diafragma derecho y opacidad en la base ho­ croscópico el líquido tiene huevos y cristales de
diagnostica un quiste hidatídico hepático abierto de tos es poco frecuente porque el quiste hidatídico mónima. Charcot-Leyden. Existen adherencias pleurales,
tórax evidenciándose incluso la ruptura diafragmá­ pulmonar generalmente es estéril. La ruptura a la pleura se aprecia en el I O a 20% engrosamiento de la pleura con derrame que tiene
tica. En pacientes con hidatidosis pulmonar debe de las amibiasis hepáticas, originando dolor toráci­ parásitos, huevos y cristales de Charcot-Leyden.
completarse el estudio con examen del hígado con Reacciones inmzmobiológicas co intenso, disnea acentuada y estado tóxico grave. Además de la pleura existe daño en el parénquima
ecotomografia abdominal y TAC si fuera necesa­ La radiografia de tórax muestra solevantamiento pulmonar, en los bronquios y en los linfáticos.
rio. (Véase Capítulo 39: Hidatidosis). Las reacciones serológicas clásicas en el pul­ del hemitórax derecho y por toracocentesis, se ob­ Existen zonas de atelectasia y fibrosis. La mucosa
món tienen positividad bastante menor que en el tiene líquido achocolatado. bronquial está congestiva y edematosa; el lumen de
Broncografia hígado, pero la reacción de ELISA tiene gran sen­ El hallazgo de trofozoitos de Entamoeba his- los bronquios puede estar ocupado con exudado o
sibilidad y especificidad en esta localización. (Véase tolytica en la expetoración o líquido pleural es ex­ reducido por edema. No es raro el hallazgo de hue-
Su uso es muy restringido. Pei'inite evidenciar el Capítulo• 39: Hidatidosis). . cepcional. Las reacqiones seml.4gicas para amibiasis. .· " vos en ganglios.
árbol bronquial y las cavidades comunicadas en él, pueden ser de gran ayuda para el diagnóstico. (Véa­ Esta parasitosis pulmonar origina una enferme-
por el uso de medio de contraste radiopaco. se Capítulo 8: Amibiasis). dad crónica de comienzo habitualmente incidioso,
430 PARASITOLOG/A MEDICA PARASITOS/S DEL PULMON 431

pero a veces comienza bruscamente con escalofríos, tipo II, que impiden el transporte de 02 a través de vado broncoalveolar con_ suero fisiológico y biopsia dad de difusión de monóxido de carbono en una
fiebre y puede ser mortal. Los síntomas más fre­ la membrana alveolocapilar y el enfermo presenta endobronquial. respiración única.
cuentes son tos crónica con expectoración mucosa, hipoxia. Los pacientes con neumocistosis tienen tos, pero Radiografia de tórax. Al inicio puede ser normal
a veces adherente y luego hemoptoica con hemop­ El Pneumocystis carinii se mantiene frenado por sin expectoración. Pueden obtenerse muestras ade­ o puede mostrar varias alteraciones. Lo más común
tisis que se repiten y hacen pensar en una TBC los linfocitos T permaneciendo latente en los cuadas haciendo inhalar a los pacientes un aerosol es la neumonía para biliar simétrica. Existen infiltra­
pulmonar. Frecuentemente existe dolor torácico por alvéolos. Suprimidos los linfocitos T helper, como salino hipertónico producido por un nebulizador dos difusos bilaterales a veces hiperclaridad en las
pleuritis. sucede en los inmunodeprimidos, los parásitos se ultrasónico. Así se obtiene en un 50 a 60% hallazgo bases con enfisema. Puede aparecer neumotórax,
En casos leves la sintomatología adecuada per­ activan y proliferan originando una neumonitis. Los de P. carinii en pacientes con SIDA. En el Hospital neumomediastino, consolidación lobar, derrame pleu­
mite al enfermo trabajar, en cambio en infecciones trofozoitos se juntan con el neumocito tipo I y ma­ General de San Francisco el examen de expectoración ral e infiltrados pseudonodulares. El P. carinii tam­
masivas los síntomas son intensos e invalidantes duran constituyendo la forma quística que se rompe tiene 79% de sensibilidad, tomando una serie de bién puede originar condensación difusa o focal. Se
pudiendo llegar a la muerte. No son infrecuentes la liberando esporozoitos. El daño principalmente es en medidas para la obtención de la muestra (ayuno, han descrito cambios quísticos y cavilación en lesio­
pleuresía y bronquiectasias; el neumotórax espontá­ la membrana alveolar. lavado de dientes, llevada la muestra de inmediato al nes nodulares preexistentes. Aproximadamente 5 a
neo es raro. La mayoría de los casos en zonas endé­ El enfermo se defiende con los linfocitos T, laboratorio, uso de mucolíticos, centrifugación, etc.), 10% de los pacientes con SIDA y neumonitis por P.
micas son leves o moderados. Al examen del enfermo macrófagos alveolares y con anticuerpos específi­ y tinción de la muestra con metenamina de plata carinii confirmado, tienen radiografia de tórax nor­
llama la atención su aspecto saludable a pesar de la cos. Los macrófagos fagocitan parásitos, el organis­ (Gomori-Grocott). El P. carinii se puede identificar mal.
tos crónica y de la expectoración hemorrágica duran­ mo fagocitado es rápidamente degradado, no evi­ fácilmente por la disponibilidad de colorantes sim­ Cintigrama pulmonar con galio. Es sensible
te años. En el examen del pulmón suelen existir sig­ denciándose posteriormente. Los corticoides impi­ ples y rápidos. La expectoración se puede teñir con aunque no específico para neumonía por P. carinii.
nos de infección pulmonar, condensación o derrame den la fagocitosis y permiten la multiplicación del Giemsa, Azul de Ortotoluidina o metenamina de plata La imagen pulmonar se aprecia 48 a 72 horas después
pleural. parásito en la cavidad del alvéolo, además inhiben la que tiñe trofozoitos y quistes. de la inyección del citrato de Galio radioactivo. En
Se debe plantear la paragonimosis en enfermos función de los linfocitos T helper e interfieren en la Si el examen de expectoración resulta negativo, los pacientes con neumonía por P. carinii existe
del aparato respiratorio en zonas endémicas o en función de los macrófagos, predisponiendo a la se efectúa el lavado broncoalveolar a través de la captación difusa a través de todo el parénquima
personas que han vivido en ella. Los antecedentes neumonitis por P. carinii. fibrobroncoscopia. El líquido del lavado se centrifuga pulmonar, aunque puede existir captación focal. Por
epidemiológicos, clínicos y radiológicos pueden La neumocistosis presenta un cuadro clínico y el sedimento se tiñe para investigar P. carinii y la tardanza del examen, por su costo y complejidad
orientar, pero no son categóricos. Se debe buscar los constante, pero inespecífico en el paciente inmu­ otros agentes. Se ha obtenido 85 a 89% de sensibi­ el cintigrama con Galio se reserva para los pacientes
huevos del parásito en la expectoración que tiene un nosuprimido. Los signos más característicos son lidad en la muestra del lavado y con biopsia trans­ con radiografia de tórax y punción pulmonar normal.
99,4% de positividad; en cambio en las deposicio­ pérdida de la capacidad respiratoria, tos seca, sin bronquial tomando varias muestras, 88 a 97%. Com­ Puede ser útil para detectar recaídas.
nes, alcanza sólo a 13,8%. Esto nos indica que para fiebre. Se producen estertores bronquiales, binando los dos métodos se tiene 94 a 100% de La neumocistosis sin tratamiento tiene una mor­
el diagnóstico etiológico basta el examen del esputo. raramente reacción pleural y adenopatía hiliar. El positividad. talidad de prácticamente 100%. Se indica intubación
El examen de expectoración se realiza en prepa­ cuadro clínico puede durar 2 a 3 semanas y a ve­ Con biopsia pulmonar con aguja fina tiene menos traqueal, ventilación asistida y fármacos. La
raciones directas entre lámina y laminilla con media­ ces, es mortal. utilidad que las endobronquiales y pueden tener pentamidina y el cotrimoxazol son los fármacos con­
no aumento. Se encuentran los huevos ovoideos, El cuadro clínico en los pacientes inmunode­ complicaciones como sangramiento y neumotórax. siderados de primera línea. (Véase Capítulo 30:
operculados y de color parduzco junto con leucoci­ primidos sin SIDA se presenta en forma insidiosa, Neumocistosis).
tos principalmente eosinófilos, glóbulos de pus, progresivo, con insuficiencia respiratoria, disnea in­ Otros exáme1_1es complementarios de diagnóstico
eritrocitos, células descamadas y cristales de Charcot­ tensa y tos seca, habitualmente sin fiebre, y de exa­ son: TOXOPLASMOSIS
Leyden. En esputos mucosos los huevos son esca­ men pulmonar con escasos signos semiológicos. Exámenes serológicos (IFI, FC, y otros). Se han
sos; en cambio en los mucopurulentos o en las he­ La neumocistosis en enfermos con SIDA tiene t1sado con poco rendimiento para el diagnóstico por El compromiso pulmonar puede existir en la
moptisis generalmente son abundantes. El hemograma previamente dos a ocho semanas de enflaquecimien­ tratarse de enfermos inmunodeprimidos. toxoplasmosis generalizada de tipo congénito o en
presenta anemia y eosinofilia elevada. to marcado, astenia, tos seca, disnea progresiva y Hemograma. Los leucocitos pueden estar poco inmunodeprimidos como procesos intersticiales y
fiebre alta, polipnea, con escasos crépitos en las elevados o normales, pero lo habitual es la leuco­ alveolitis hemorrágicas. En inmunodeprimidos es una
NEUMOCISTOSIS bases pulmonares. En el examen de fondo de ojo penia. de las manifestaciones más frecuentes junto con la
presenta un exudado algodonoso sugerente de esta Cuantificación de linfocitos T helper ( CD4). Nos encefalitis y la miocarditis toxoplasmósica y puede
La infección se adquiere temprano en la vida por afección, si no existe diabetes mellitus o hipertensión da el grado de inmunodepresión del paciente. ser causa de muerte si no se establece tratamiento
la inhalación de quistes pequeños, esféricos con arterial. En raras ocasiones puede haber disemina­ Proteinemia. Existe hipoalbuminemia, especial­ oportuno. Para el diagnóstico debe perseguirse el
gruesa pared que pasan de hombre a hombre, mo­ ción extrapulmonar de P. carinii. Se han descrito mente en casos de SIDA. hallazgo del T. gondii buscándole en tejido pulmonar
viéndose en el alvéolo pulmonar y originando una localizaciones en ganglios, bazo, hígado, miocardio, Análisis de gases en sangre arterial. Es de o en el lavado broncoalveolar. La radiografia de tórax
infección asintomática que permanece latente en el estómago, intestino delgado, médula ósea, suprarre­ utilidad para determinar la severidad del compromi­ puede presentar imágenes de tipo miliar u otras com­
hospedero inmunocompetente. En una comunidad, nales, tiroides y huesos. so pulmonar. La hipoxemia es frecuente con patibles con neumonitis. (Véase Capítulo 29:
el 80% de los mayores de I O años son seropositivos, El diagnóstico debe plantearse en todo paciente hipocapnia y alcalosis respiratoria. El grado de Toxoplasmosis).
lo que indica la frecuencia de la infección. inmunodeprimido con síntomas respiratorios, tenga hipoxemia está en relación con la severidad del
Los quistes maduros inhalados se rompen en el o no radiografia de enfermedad pulmonar. compromiso pulmonar. Es corriente el aumento de FILARIOSIS
alvéolo y liberan formaciones que originan trofozoitos El diagnóstico definitivo Jo da la identificación la diferencia de la tensión de 02 alveoloarterial entre
amiboideos. La reproducción del parásito origina la del P. carinii. Para la obtención de muestras se ha el reposo y el ejercicio. Afecciones distribuidas en áreas tropicales Y
formación de acúmulos PAS positivos, eosinófilos indicado examen de expectoración, biopsia de pul­ Pruebas de fimción pulmonar. Se encuentran subtropicales en donde constituyen problemas de
en los.alvéolos pulmonares. Los trofozoitos se ad­ món abierto, aspiración percutánea transtorácica del con frecuencia. alteraciones inespecíficas. Los ha­ salud pública. Pueden afectar al pulmón.
hieren a los neumoéitos tipo 1, no son expectorados, pulmón con aguja fina, y el uso de la fibro­ llazgos típicos incluyen reducción de la capacidad
desaparecen y son reemplazados por neumocitos broncoscopia, tomando la muestra en forma de la- vital, de la capacidad pulmonar total y de la capaci- Dirofilaria immitis. Parásito del perro, la infec-
432 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOSIS DEL PULMON 433

c10n humana es excepcional. El mosquito vector otros órganos. Las ninfas no encupuladas se pueden TABLA 48-1 a menudo son estables. Durante meses pueden tener
1. accidentalmente transmite al hombre microfilarias que encontrar en la cavidad pleural o peritoneal. La nin­ leucocitosis, hipereosinofilia e hipergammaglobu­
CLASIFICACION DE LOS PULMONES
llegadas al corazón derecho, pueden obstruir una fa de L. serrato mide 3,5 a 6 mm de longitud. linernia. ElAscaris summ persiste corno larva, pero a
EOSINOFILOS PARASITARlOS
rama de la arteria pulmonar originando un infarto veces puede completar su ciclo.
pulmonar. La mayoría de los casos son asintomáti­ ENFERMEDAD DE CHAGAS A. Pulmones eosinófilos parasitarios fugaces (síndrome
cos. de Loeffler) por:
Dirojilaria immitis, W11cltereria baucroft y
Los enfermos chagásicos crónicos con acalasia Br11gia malayl Originan el "pulmón eosinófilo
Ascaris lumbricoides
Wuchereria bancrofti y Brugia malayi. (Véa­ esofágica presentan regurgitaciones y pirosis que le filariano".
se Capitulo 34: Filariosis). Son frecuentes en países ocasionan bronquitis y neumonitis a repetición. Ancylostoma duodena/e
tropicales. Muchos años después de la prirnoin­ Necator americanus Diagnóstico del pulmón eosinófilo
fección se produce la etapa crónica que ahora nos CISTICERCOSIS Strongyloides stercoralis
interesa. Ambas son filarias linfáticas que originan Sclzistosoma mazzsoni En la anarnnesis se debe investigar el origen
el pulmón eosinófilo filariano o eosinofilia pulmo­ Frecuentemente el Cysticercus cel/ulosae en el geográfico del enfermo, su edad (los niños frecuen­
nar tropical, que es poco frecuente. Se caracteriza pulmón no ocasiona síntomas. B. Pulmones eosinófilos parasitarios durables: temente tienen toxocarosis), el sexo, eliminación de
por tos paroxistíca nocturna con escasa expectora­ Con cumplimiento del ciclo parasitario: parásitos, tratamiento medicamentoso o ingestión
ción, crisis asrnatiformes, ocasionalmente hemopti­ Paragonimzzs sp de fármacos. Fuera de los síntomas respiratorios, se
sis y mialgias. Al examen físico se puede encontrar NEUMONIAS EOSINOFILICAS debe indagar sobre posibles manifestaciones aso­
Sin cumplimiento del ciclo parasitario:
fiebre, hepatoesplenomegalia y adenopatías. O PULMONES EOSINOFILOS ciadas (cutáneas, cardíacas, nerviosas, etc.), que
Toxocara canis
Existen remisiones espontáneas, pero sin trata­ puede hacer plantear una vasculitis. En cuanto a la
miento se pueden producir recaídas y progresando Pueden tener diferentes etiologías, se caracteri­ Toxocara cati radiografía de tórax el infiltrado pulmonar es muy
la enfennedad, llegar a la fibrosis pulmonar. zan por infiltrados eosinófilos pulmonares con gran Ascaris suum variable, puede ser único o múltiple, uni o bilateral.
Habitualmente existe gran hipereosinofilia eosinofilia periférica. Desde la primera descripción Dirofilaria immitis La magnitud de la eosinofilia sanguínea es valiosa
(3.000 a 5.000 eosinófilos/mm3 ). El estudio radio­ de Loeffler de un síndrome transitorio con manifes­ Wuchereria bancrofli, Brugia malayi, etc. para el diagnóstico, puesto que puede servir de orien­
lógico de tórax muestra lesiones miliares en ambos taciones clínicas, infiltrados pulmonares evidencia­ tación en parasitosis.
cainpos pulmonares. Los títulos de anticuerpos anti­ dos en las radiografías de tórax por sombras fugaces Puede ser útil el estudio de la expectoración o del
filarias son muy altos con ausencia de microfilarias y eosinofilia sanguínea, este cuadro ha ido crecien­ líquido de lavado broncoalveolar. La presencia de
en ta sangre periférica. En muchos casos se altera . do en cuanto a causas que lo originan. tico, pero en invasiones masivas puede existir inten­ eosinófilos es un buen apoyo en favor del diagnós­
1 sa sintomatología y aun ser mortal. Los infiltrados
la función pulmonar, disminuye la capacidad vital, Este síndrome puede deberse a parásitos, bacte­ tico de pulmón eosinófilo. Además pueden encon­
''¡¡' : lá capacidad pulmonar total y el volumen residual. rias, virus, hongos, vasculitis o fármacos como pulmonares habitualmente son poco frecuentes y trarse cristales de Charcot-Leyden y huevos o larvas
., 1
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El examen histológico al comienzo tiene infil­ nitrofurantoina, sulfas, penicilina, tetraciclina, cuando existen, desaparecen en tres a cuatro sema­ de parásitos.
trados interalveolares, seguido de bronconeumonía estreptomicina, clorpropamida, antidepresivos nas. A veces, a pesar de una investigación exhausti­
y abscesos eosinófilos. Después de varios meses los tricíclicos, sales de oro, isoniazida, etcétera. va, no se logra determinar la etiología. El clínico
infiltrados de eosinófilos, linfocitos e histocitos se El parásito puede estar temporalmente en el Sc/zistosoma mausoui. En la etapa inicial los puede realizar una biopsia pulmonar o indicar tin
acompañan de reacciones granulomatosas y se ori­ pulmón corno una etapa de su ciclo vital (Síndrome parásitos juveniles pasan por el pulmón originando tratamiento de prueba con corticoides o antipara­
gina fibrosis. La fase final es una fibrosis intersti­ de Leoffler) o puede permanecer en forma inhabi­ síntomas respiratorios, infiltrados radiológicos y sitarios. La biopsia puede evidenciar un parásito,
cial crónica sin eosinofilia tisular, encontrándose tual en el hombre no llegando las larvas al estado eosinofilia sanguínea. (Véase Capítulo 41: Esquisto­ una granulornatosis o una vasculitis.
muy pocas veces, rnicrofilarias en el pulmón. adulto (Tabla 48-1 ). somosis). La evolución clínica es variable, algunos enfer­
El tratamiento con dietilcarbarnazina es efecti­ Los agentes etiológicos parasitarios pueden ser: mos tienen evolución dramática pudiendo presentar
vo. Paragouinms westermaui. Los pulmones eosi­ distrés respiratorio agudo del adulto. Característica
Ascaris l11111bricoides. El enfermo presenta sín­ nófilos parasitarios duraderos pueden ser la parte es su sensibilidad a la corticoterapia.
PENTASTOMOSIS tomas respiratorios de intensidad variable, hiper­ final del ciclo vital del parásito en el hombre como
(Véase el Capítulo 44: Otras parasitosis de los te­ eosinofilia sanguínea y radiografía de tórax con sucede con Paragonimus westennani que después
jidos). infiltrados pulmonares que puedén ser escasos o de un período de incubación de 3 a 6 semanas pro­ BIBLIOGRAFIA
múltiples. El cuadro desaparece en una a dos sema­ voca una broncopatía con infiltrado que se eviden­
Cinco especies de pentastórnidos se han encon­ nas. En el examen de expectoración se puede en­ cian en las radiografías y eosinofilia periférica. (Véa­ Arroyo R, Vargas M, Santamaóa S. Pentastomosis en Costa
trado en el hombre, siendo el más conocido Lingua­ contrar las larvas del parásito. (Véase Capítulo 16: se Capítulo 42: Paragonimosis). Rica, por Linguatula serrato y su diagnóstico diferen­
tu/a serrata. En los pocos casos descritos, rara vez Ascariasis). cial de L. recurvata. Rev Latínoam Microbio[ 1986;
se encuentra el parásito adulto, siendo más frecuen­ Síndrome de larva migran te visceral. El síndro­ 28: 157-66.
te encontrar las formas ninfales en el pulmón, las U11ci11arias spp. Tiene las mismas características me de larva migrante visceral es ocasionado por Gottlieb B, Reyes H. Neumonía por Pneumocystis carinii.
cuales originan granulornas que se calcifican en que el anterior. (Véase Capítulo 18:Anquilostomosis). diferentes helmintos parásitos habituales de anima­ Rev Med Chile 1982; 110: 53-9.
forma de capas concéntricas con restos parasitarios les y que en el hombre no completan su desarrollo lvanisevich O, Rivas CI. Equinococcosis hidatídica. Bue­
en su centro. La sintomatología es escasa o nula. Stro11gyloides stercora/is. Después de la penetra­ como Toxocara canis y T. cati. Sus larvas migran nos Aires, Argentina: Editorial del autor, 1962.
Debe diferenciarse de una tuberculosis o neoplasia ción de las larvas a través de la piel, raramente por ubicándose en el hígado y en pulmón. (Véase Capí­ Nahmias J, Goldsmith R, Soibelman M. Three to seven
pulmo_nar. El diagnóstico generalmente es casual vía oral, realizan-el ciclo de Looss y finalmente se tulo 38: Larvas migran/es). Los pacientes pueden ye\U'S follow-up after albendazol treatm_e�tgf68 patients
en una intervención quirúrgica o en una autopsia al fijan en el duodeño.' (Véase Capítulo 19: EstrongÍÍoi­ tener tos quintosa y al examen, finos estertores pul­ with cystic echinococcosis (Hidatid disease). Am Trap
encontrar las ninfas encapsuladas en el pulmón u dosis). Su paso por el pulmón puede ser asintorná- monares. Los infiltrados o nódulos uni o bilaterales Med Parasitol. (England) 1994; 88: 295-304.
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1
i.1
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7
!

434 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo49


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A partir del intestino, muchos parásitos transi­ Malaria


tan o se localizan en el hígado del hombre, utilizan­
do diversas vías: la mayoría llega por la sangre, a Las sucesivas rupturas de los glóbulos rojos
través de la vena porta; algunos, por la vía biliar, parasítados y el bloqueo de los capilares, provoca
ascendiendo por el conducto colédoco; y otros lo distensión y oclusión de los vasos pequeños del
invaden desde el peritoneo. Mientras algunos pará­ hígado. Se produce una hiperplasia del sistema
sitos atraviesan el órgano como parte de su ciclo reticuloendotelial y sus células fagocitan y destru­
evolutivo, sin parasitario, otros son capaces de de­ yen una gran cantidad de eritrocitos parasitados.
tenerse en su seno y comprometer al parénquima El pigmento malárico se deposita en los macró­
hepático, a la vía biliar, o a ambos. En la Tabla 49-1 fagos y en los espacios tisulares. Se comprueba de­
se resumen las más importantes parasitosis hepato­ generación centrolobulillar y necrosis de las células
biliares, su distribución geográfica y el tipo de le­ hepáticas. En la autopsia, el hígado está aumentado
sión predominante. de tamaño y presenta una coloración pardo obscura
Entre las protozoosis, las principales infeccio­ o grisácea.
nes del hígado son las producidas por la amibiasis, En las infecciones provocadas por Plas111odi11111
la malaria, la leishmaniosis visceral o kala-azar, la falciparum, el compromiso hepático es importante,
enfermedad de Chagas y la toxoplasmosis. observándose ictericia, hemorragias y anemia in­
Los nematodos, provocadores directos del daño tensa. En las infecciones debidas a los otros plasmo­
hepático, son las larvas migrantes viscerales, los dios de la malaria, los pacientes presentan espleno­
áscaris adultos errátiles que ascienden por la vía megalia y el daño hepático es más leve. En las zonas
biliar y los raros casos de capilariosis. endémicas, se busca la hepatomegalia como un ín­
Sin duda, las parasitosis más importantes del dice de la infección malárica en los niños.
hígado son las producidas por los platelmintos, tan­
to trematodos como cestodos. Entre las producidas Kala-azar
por los trematodos, se destaca principalmente la
esquistosomosis por su frecuencia y trascendencia Junto a la esplenomegalia y al síndrome febril,
patológica; y luego, la fasciolosis, la clonorquiosis, se suele encontrar aumento del tamaño del hígado,
la opistorquiosis y la dicrocoeliosis. Por fin, entre habitualmente duro y poco doloroso. Esta hepato­
las provocadas por los cestodos es fundamental, en megalia se debe a una hiperplasia del sistema reti­
muchas regiones, la localización hepática del quiste culoendotelial, con las células de Küpffer llenas de
hidatídico y la hidatidosis multilocular, además de leishmanias y diverso grado de tumefacción turbia,
algunos casos raros de cisticercosis del hígado. degeneración grasa y discreta fibrosis.
Una clasificación anatomoclínica, operante en
la práctica, aparece en la Tabla 49-2. Enfermedad de Chagas

AFECCIONES DIFUSAS Trypanosoma cruzi forma pseudoquistes de


DEL PAREN QUIMA HEPATICO amastigotos prácticamente en todos los tejidos; pero,
sobre todo, en la musculatura estriada, en el sistema
Se presentan en las infecciones debidas a los nervioso y en el sistema reticuloendotelial. Es común
protozoos: malaria, kala-azar, enfermedad de Cha­ que el hígado y el bazo, en la fonna aguda sintomá­
gas y toxoplasmosis. Lo característico de estas en­ tica, estén aumentados de tamaño, lo que constituye
fennedades es la hiperplasia del sistema reticulo­ un signo de primordial importancia para plantear el
endotelial, que determina el aumento de volumen diag¡¡ósticó de la forma congénita de la infección. Se
del hígado. palpa el hígado de superficie lisa, aumentado de
li
43·6 PARASITOLOGIA MEDICA PARAS/TOSIS DEL HIGADO 437

TABLA49-I TABLA49-2 AFECCIONES LOCALIZADAS


PRINCIPALES PARASITOSIS DEL HIGADO. Y DE LAS VIAS BILIARES CLASIFICACION ANATOMOCLINICA DE LAS ENELPARENQUIMAHEPATICO
,·,,
.
PRINCIPALES PARASITOSIS DEL HIGADO
1

Parasilosis Distribución geográfica Tipo de lesión Abscesos


AFECCIONES DIFUSAS: Malaria
PROTOZOOSIS Absceso hepático amibiano
Absceso hepático amibiano Cosmopolita Tejido hepático necrosado, colectado en Leishmaniosis visceral o
(Entamoeba histolylica) un pseudoabsceso. Kala-azar La llegada por la vena porta de los trofozoitos
Kala-azar América Latina, Africa y Asia Hiperplasia del SRE, tumefacción turbia y Enfermedad de Chagas de la Entamoeba histo/ytica hasta el hígado, siem­
(Leishmania do11ovani) degeneración grasa. Toxoplasmosis pre es secundaria a lesiones ulcerosas amibianas
Enfermedad de Chagas América Latina Hiperplasia del SRE, infiltrado inflamato­ del intestino. Esta invasión debe ser un fenómeno
AFECCIONES LOCALIZADAS: frecuente, pero el hígado que no esté previamente
(Trypanosoma cruzi) rio linfoplasmocitario y diversos grados
de fibrosis. Abscesos Amibiasis sensibilizado a la amiba, aparentemente lisa a los
Ascariasis parásitos. Los trofozoitos constituyen un émbolo
Malaria (Plasmodium spp) Cosmopolita Hígado de coloración pardo obscuro o gri­ parasitario que se atasca en las pequeñas ramas de
sáceo por el depósito de pigmento malárico, Granulomas Larva migrante visceral la vena porta; de este trombo, salen las amibas, las
degeneración centrolobulillar y necrosis Granulomas por huevos de cuales, gracias a su acción enzimática, pasan a los
de células hepáticas e hiperplasia del SRE. helmintos espacios periportales e inician su acción necrotizante
Toxoplasmosis Cosmopolita Infiltrado inflamatorio linfoplasmocitario, Quistes Hidatidosis sobre el parénquima hepático. Este fenómeno, pri­
(Toxoplasma gondii) focos de necrosis e hiperplasia del SRE. Cisticercosis mero microscópico, crece al confluir varios focos
amagados, hasta formar los abscesos que !Íegan a
HELMINTOSIS AFECCIONES FIBROTICAS: medir cinco o más centímetros de diámetro. El con­
Larva migrante visceral Cosmopolita Granuloma con infiltrado eosinófilo en Esquistosomosis tenido del absceso es tejido hepático necrosado y
(Toxocara canis y T. cati) cuyo centro se observa una larva. abundante glóbulos rojos, los que le confiere el as­
Fasciolosis
Ascariasis Cosmopolita Raros casos de formación de abscesos pu­ pecto de pus achocolatado.
(Ascaris lumbricoides) rulentos al ascender desde el intestino AFECCIONES OBSTRUCTIVAS: Cuando la sintomatología es típica, se presenta
hasta el colédoco. la tríada de dolor, hepatomegalia y fiebre; sin em­
De la via biliar Fasciolosis bargo, no son raros los cuadros arrastrados con
Capilariosis Norteamérica, Asia y Microabscesos centrados por huevos con Hidatidosis
(Capillaria hepatica) Australia tapones mucosos en sus polos. compromiso progresivo del estado general; febrículas
Ascariasis que, a veces, es necesario investigar intencionada­
Esquistosomosis América Latina, Africa y Granuloma alrededor de los huevos del mente; dolor vago en el hipocondrio derecho y cuan­
(Sclzistosoma mansoni y Asia gusano, fibrosis extensa e hipertensión De la via hemática Esquistosomosis
Hidatidosis do se efectúa presión sobre la parrilla costal, y di­
S. japonicum) portal. verso grado de aumento de volumen del hígado.
Fasciolosis América Latina, Norte de Hiperplasia pseudoglandular del epitelio Estos últimos casos son dificiles de diagnosticar y
(Fasciola hepatica) Africa y cuenca del de los canalículos biliares, rodetes fibro­ en ellos suele indicarse la cura de prueba con eme­
!i Mediterráneo sos pericanaliculares y grado variable de
fibrosis del parénquima hepático.
tina: si el diagnóstico es acertado, la mejoría se

lill
manifiesta dentro de las cuarenta y ocho horas de
Clonorquiosis Asia Idem en infecciones masivas. consistencia y, habitualmente, indoloro. instituido el tratamiento.
(C/onorchis sinensis) En la forma crónica de la enfermedad, comúnmen­ El diagnóstico es eminentemente clínico. Como
te no se palpa el órgano, salvo si se trata de u n es lógico, el examen de heces no es pertinente,
¡::I· Opistorquiosis (Opistorchis
Jelineus y O. viverrim¡
Asia Jdem en infecciones masivas.
hígado congestivo por l a insuficiencia cardíaca. porque sólo puede revelar amibiasis intestinal. Los
exámenes complementarios más útiles son el hemo­
Dicrocoeliosis Europa, Afiica, URSS, Idem en infecciones masivas. Toxoplasmosis grama (leucocitosis con desviación a la izquierda);
(Dicrocoelium dendritic11111) China y Siria.
pruebas serológicas (reacción de inmunofluores­
Hidatidosis Cono sur de América Latina, Compresión del parénquima, formación La capacidad de multiplicación intracelular de cencia indirecta, especialmente útil para controlar
(Echi11ococcus gram1/os11s) Australia, N. Zelandia, países del de rodetes fibrosos periquísticos (adven­ Toxoplasma gondii, con producción de inflamación la evolución postratamiento; reacciones de inmuno­
Mediterráneo y Cercano Oriente. ticia) y obstrucción de las vías biliares y y de focos de necrosis e hiperplasia del sistema precipitación, que siendo menos sensibles que la
del sistema porta. reticuloendotelial, explica el aumento de volumen anterior, son útiles en el absceso hepático, en el cual
Hidatidosis multilocular Norteamérica, Norte de Europa, Formación larvaria de contorno irregular, del hígado en esta infección parasitaria. Igual que las tasas anticuerpos son elevadas y ELISA); radio­
(Echinococcus multi/ocu/aris URSS, algunas zonas de América prolongaciones racemosas y sin membrana en la enfermedad de Chagas, la forma congénita, en Íogía (ascenso del hemidiafragma derecho, derrame
y E. oligarthrus) Latina, Australia y Nueva Zelandia adventicia, con destrucción del parénqui­ la fase de generalización, se caracteriza por la pleural basal, etc.); cintigrafia hepática, ecografia y
ma en extensas zonas. espleno y la hepatomegalia, duras y poco dolorosas. tomografia axial computarizada. (Véase el Capítulo
Cisticercosis Pequeñas vesiculas ovoides, blanquecinas En suma, el compromiso hepático forma parte 8: Amibiasis).
(Cysticercus cel/ulosae) y translúcidas, con el escólex invaginado del cuadro clínico general de cada una de. estas El tratamiento de elección se efectúa con medi-
y circundado por un tenue rodete fibroso. protozoosis; el diagnóstico'y la actitud tetápéuiiéa camentos antiamibianos que actúan sobre los teji­
se analizaron en los capítulos correspondientes. dos, como la emetina y los derivados nitroimida-
438 PARASITOLOG/A MEDICA PARAS/TOSIS DEL HIGADO 439

,.
--� ..Ji.� reemplazo, se emplean reacciones de inmunofluo­ El diagnóstico se plantea frente a un paciente
-�--- rescencia, pruebas de imnunoprecipitación y ELI­ que procede de una zona ganadera endémica, con
· SA. El tratamiento se efectúa con tiabendazol, que una tumoración hepática que contrasta con un buen
mejora las condiciones generales del paciente y hace estado general. Ayudan al diagnóstico, la cintilogra,
descender la eosinofilia. fia, la ecografia, la tomografia axial computarizada y
las pruebas inmunobiológicas. (Figuras 49-3 y 49-4).
Gra11u/0111a por huevos de helmintos (Véase el Capítulo 39: Hidatidosis).

En la esquistosomosis se producen granulomas Hidatidosis multilocular o alveolar


por huevos de Sclzistosoma 111anso11i y de S. japo-
11icu111, los que llegan al hígado por la vía portal. La lesión que producen en el hígado las larvas
Estos granulomas se acompañan de una infiltración de Eclzinococcus multilocularis es grave, porque
linfoplasmocitaria y son los determinantes, cuando infiltran y destruyen el parénquima, provocando
Figura 49-1. Granuloma del hígado provocado por hue­ el número de huevos es elevado, de la fibrosis peri­ prolongaciones racemosas que se extienden sin que
vos de Schislosoma mansoni. portal, tan característica de esta parasitosis (Figura se forme una capa adventicia a su alrededor. El
49-1 ). En los raros casos de infección humana de­ hígado presenta extensas zonas de necrosis y una
zólicos. A veces, debe complementarse con puncio­ bida a Capillaria hepalica, nematodo de la rata que destrucción progresiva, con numerosas cavidades
nes evacuadoras e, incluso, mediante el abordaje se ubica en el hígado, pueden formarse granulomas que a veces confluyen, constituyendo una gran co­
quirúrgico. en cuyo centro aparecen los huevos con sendos ta­ lección de material necrótico. El pronóstico es som­
pones mucosos eu sus polos, parecidos a los huevos brío y su único tratamiento es el quirúrgico.
Abscesos hepáticos por áscaris errátiles del Tricl111ris trichiura. Esta infección, de la cual no
hay más de algunas decenas de casos humanos, se Cisticercosis del hígado
En los países tórridos, donde la ascariasis es desarrolla con hepatomegalia, leucocitosis y
¡ prevalente, puede generarse, como consecuencia de eosinofilia muy elevada. El Cysticercus cellulosae se localiza, preferen­
temente, en el tejido celular subcutáneo y en la
la migración de Ascaris lumbricoides por el con­ Además, se han descrito algunos raros casos de Figura 49-2. Radiografia de quiste hidatídico hepático
ducto colédoco, la fonnación de abscesos hepáticos granulomas hepáticos producidos por los huevos calcificado. (Caso del Dr. Jorge Sapunar, Chile). musculatura estriada, además de hacerlo en el SNC
piógenos. El gusano arrastra génnenes desde la vía del Ascaris lwnbricoides, eri infecciones errátiles y en el ojo; pero en las infecciones humanas masi­
canalicular y se produce un cuadro clínico violento, de este parásito, que pueden afectar al hígado. vas también el hígado puede albergar al parásito.
en el que se destacan el síndrome febril y las mani­ se desencadena una ictericia obstructiva de pronós­ En estos casos y por su tamaño reducido, no produ­
festaciones propias de la obstrucción de la vía biliar. Quistes tico grave. Otra complicación del quiste es la infec­ ce sintomatologia y suele ser un hallazgo de la
Son estados muy graves, de desenlace generalmen­ ción, la que siempre se produce por vía canalicular: autopsia.
te mortal. (Véase Figuras 16-5 C y D). Hidatidosis los génnenes piógenos, a través de los pequeños
canalículos biliares, pueden infectar al quiste cuan­ AFECCIONES FIBROTICAS DEL HIGADO
Granulomas Los quistes hidatídicos hepáticos, especialmen­ do hay efracciones en sus membranas; en estos ca­
te aquellos de localización central, alcanzan un ta­ sos, la sintomatología corresponde a un absceso. En Esquistosomosis
Ante la presencia de larvas o de huevos de hel­ maño considerable antes de llegar a producir sinto­ algunas oportunidades el quiste puede calcificarse
mintos, el hígado reacciona formando alrededor de matología. Los quistes que se ubican en el borde parcial o totalmente ·(Figura 49-2). La llegada de huevos del Schistosoma mansoni
ellos un granuloma con elementos linfomonocitarios, anterior, suelen palparse como una tumoración lisa
eosinófilos y fibroblastos, que suelen determinar un e indolora, en un paciente con buen estado fisico.
cuadro clínico de importancia (Figura 49-1 ). Especialmente en los niños, puede encontrarse el
frémito hidatídico, el cual, si bien es casi patogno­
larva migrante visceral mónico, es de rara observación.
El quiste hidatídico hepático, caracterizado por
Las larvas del áscaris del perro, To.tocara ca11is su crecimiento lento durante años, provoca sínto­
y las del gato, T. cali, pueden infectar al hombre y, mas por la compresión y por el rechazo de los órga­
al dirigirse hacia los pulmones, atraviesan el híga­ nos vecinos. Aparece dolor, habitualmente como
do por la vía porta. Allí pueden ser retenidas, cons­ sensación de peso en el hipocondrio derecho, dis­
tituyendo el cuadro de larva migrante visceral. pepsia provocada por los alimentos grasos y meteo­
Este cuadro clínico se presenta en niños peque­ rismo.
ños y se caracteriza por síndrome febril, hepatome­ Cuando el quiste se complica, se produce un
. galia, eosinofilia muy elevada e hipergammaglobu­ cambio en la sintomatología. La ruptura hacia el
linemia, además del eventual compromiso pulmo­ peritoneo· detennina, como consecuencia imnedia­
nar, ocular, del sistema nervioso central y de otros ta, un cuadro de shock anafiláctico de intensidad
órganos. El diagnóstico parasitológico directo, con variable, desde una simple urticaria hasta el colap­
la comprobación de la presencia de larvas mediante so; y, como consecuencia tardía, la hidatidosis se­ Figura 49-3. TAC: Quiste hidatídico hepático con una vesícula hija colapsada. H = hígado; QH = Quiste hidatídico;
la biopsia hepática, es dificil y engorroso; en su cundaria. Si la ruptura se efectúa hacia la vía biliar, E = Estómago.
l
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;,1:
¡ 1;
440 PARASITOLOGIA MEDICA PARASITOS/S DEL H/GADO 441

AFECCIONES OBSTRUCTIVAS piógenos en el hígado. El cuadro es más frecuente


en los niños de zonas tórridas o templadas e inten­
De la vía biliar samente parasitados con el A. /11111bricoides.

Fasciolosis Del sistema porta

Ya analizada en el párrafo anterior, la Fasciola La circulación venosa del hígado, tanto de la vía
hepatica comienza su acción patológica en el perio­ porta como de las venas suprahepáticas, puede obs­
do de estado precisamente en el nivel de lós caria­ truirse por causas parasitarias.
lículos biliares. Por su tamaño relativamente gran­
de, su cuerpo blando que le permite desplazarse y su Esq11istoso111osis
tegumento recubierto de finas espículas, la F. he­
patica provoca daño en el epitelio de los canalículos En las formas hepatoesplénicas, en fase de ci­
biliares, la destrucción de células y su reemplazo rrosis descompensada, el grave compromiso fibrótico
por tejido conjuntivo y la proliferación epitelial de del parénquima hepático determina un síndrome de
tipo pseudoglandular. Así se inducen alteraciones hipertensión portal, con una hepatomegalia no muy
Figura 49-4. Enfenna de 32 años de edad, sometida desde los 9 años a 12 intervenciones quirúrgicas por quistes en el flujo de la bilis, obstrucciones intracanaliculares acentuada, gran esplenomegalia, ascitis y circula­
hidatídicos de diversas localizaciones, incluso ósea. {A) TAC: Quiste del lóbulo derecho del hígado de 9x9xl4 cm de y la formación del llamado "barro biliar", constitui­ ción colateral. Son los estados finales de la parasi­
diámetros transversal, anteroposterior y longitudinal, con múltiples vesículas hijas; además, otro quiste calcificado con do por detritos celulares, por huevos del helminto tosis, acompañados habitualmente de gran compro­
vesículas hijas, en el lóbulo caudado. {B) TAC luego de 2 curas con albendazol de I mes cada una con un mes de y, en frecuentes ocasiones, por cálculos biliares. miso del estado general, enflaquecimiento, anemia
intervalo. Disminución de tamaño del quiste {9x7xll cm), con cierto colapso de la pared anterior y desaparición de Cuando se crea la condición de cavidad cerrada, y desnutrición.
todas las vesiculas hijas; también se aprecia desaparición de las vesículas hijas de la imagen quística calcificada. (Caso aparecen crisis febriles, leucocitosis y aumento de
del Dr. Antonio Atias, Chile). los eosinófilos. Hidatidosis

Hidatidosis Las venas suprahepáticas pueden sufrir una com­


y del S.japonicum al parénquima hepático determi­ liculares, pericanaliculares y parenquimatosas, res­ presión crónica, debido a quistes hidatídicos hepá­
na,· después de un tiempo prolongado, la produc­ ponsables de la sintomatología del periodo de esta­ La hidatidosis hepática suele afectar la vía biliar, ticos, de ubicación central o de la cúpula, que llegan
ción de la esquistosomosis hepatoesplénica. do de la infección. sea por la compresión extrínseca o por su obstruc­ a generar el síndrome de Budd-Chiari.
Los granulomas producidos alrededor de los Se produce hiperplasia pseudoglandular del epi­ ción. Algunos quistes hidatídicos hepáticos centra­
huevos, ocasionan una intensa inflamación peripor­ telio de los canalículos biliares, rodetes fibrosos les, que pueden llegar a medir un tamaño considera­
tal que dificulta la circulación sanguínea y determi­ pericanaliculares y un grado variable de esclerosis ble; obstruyen las vías biliares principales y produ­ BIBLIOGRAFIA
na un cuadro de hipertensión portal y de sus ramas del parénquima hepático, vecino a las vías biliares. cen, en algunos raros casos, una cirrosis biliar, con
principales, especialmente de la vena esplénica. Así, Clínicamente existe una hepatomegalia sensi­ gran hepatomegalia e ictericia. Además, cuando un Adson MA. Mass lessions of the liver. Mayo Clin Pró�
se genera, en primer lugar, una hepatomegalia dura ble; dolor de carácter variable en el hipocondrio quiste hidatídico se rompe hacia la vía biliar, provoca 1986; 61:362-7.
y de consideración y, sobre todo, una esplenomega­ derecho, como sensación de peso o como cólicos un grave cuadro obstructivo agudo, caracterizado Barnes PF, De Cock KM, Reynolds TN, Ralls PW. A
lia que suele palparse, como una masa consistente, biliares; fiebre, al comienzo baja y constante, pero, por ictericia, fiebre, calofríos y gran compromiso del comparison of amebic and pyogenic abscess of the
muy aumentada, a la altura del ombligo. en el período de estado, como brotes febriles coin­ estado general. El diagnóstico se puede sospechar liver. Medicine 1987; 66:472-83.
Los pacientes consultan por la sensación de cidentes con crisis de leucocitosis y aumento de por la aparición de una elevada eosinofilia, durante Bennet WF, Bova JG. Review of hepatic imaging and a
malestar abdominal o por hematemesis, debida a la los eosinófilos circulantes; y trastornos digestivos los primeros días de su evolución. problem-omitted approach to liver masses. Hepatology
ruptura de várices esofágicas. No son infrecuentes vagos, con meteorismo e intolerancia hacia los ali­ 1990; 12:761-75.
las alteraciones hematológicas, con anemia de gra­ mentos grasos. El cuadro clínico varía si se presen­ Ascariasis EI-Tahir MJ, Omojola MF, Malatani Y y cols. Hydatid
do variable, leucopenia, trombocitopenia y tan complicaciones debidas a la migración de dis­ disease ofthe liver: evaluation of ultrasound and computed
eosinofilia elevada. A pesar de sli profundo com­ tomas a la vía biliar ·extrahepáticas lo que produce El áscaris errátil, que asciende por la vía biliar, tomography. Br J Radiol 1992; 65:390-2.
promiso fibrótico y circulatorio, las funciones del colecistitis agudas, empiemas vesiculares y obstruc­ provoca un síndrome obstructivo típico: ictericia, Gómez León N, Del Campo L. Técnicas de imagen en el
hígado se conservan dentro de niveles relativamen­ ciones coledocianas. fiebre, calofríos y el desarrollo de una colangitis, estudio de la lesión focal hepática. Rev Esp EnfDigest
te eficientes por mucho tiempo. Para el diagnóstico, es útil tener en cuenta el que puede culminar con la formación de abscesos 1995; 87:379-81.
·.¡ antecedente de haber ingerido berros, la presencia
l
Fasciolosis de otros familiares con sintomatología similar y los
exámenes de laboratorio. Entre estos últimos, los de
En el período de invasión de la fasciolosis, los certeza permiten encontrar huevos de la F. hepatica
distomas juveniles, luego de atravesar las paredes en las heces y en la bilis, a partir de los dos meses
del intestino y reptar por el peritoneo, perforan la de la infección. Además, la intradermorreacción y
cápsula de Glisson y el parénquima hepático, para las reacciones serológicas, ayudan al diagnóstico,
establecerse en las vías biliares intrahepáticas. Des­ . así como los exámenes complementarios: el hemo­
,:
1
de este lugar, que constituye su hábitat definitivo, la . grama con eosinofilia muy alta, fosfatasas alcalinas
Fasciola ltepatica· desencadena alteraciones cana- elevadas y ecotomografia hepática alterada.
1

11.:1
:':¡'
CUARTA PARTE
Artrópodos de interés médico
Capítulo 50

CARACTERISTICAS GENERALES
DE LOS ARTROPODOS
ANTONIO ATIAS

Los artrópodos son animales invertebrados, de pertenecen a las clases Crustacea, Arachnida e
cuerpo segmentado, protegidos por un exoesqueleto Insecta (Tabla 50-1 y Figura 50-1) y sus principales
quitinoso duro y esclerotizado y provistos de apén­ características son:

¡¡
dices articulados en fonna de patas, piezas bucales
y antenas. Internamente, el cuerpo está constituido Crustáceos. Son artrópodos acuáticos que res­ '.l;
por el hemocele, cavidad llena de hemolinfa, líquido piran por branquias, de tamaño variable, desde mi­
que baña todos los órganos internos. Dentro de este núsculos hasta del tamaño apreciable como son los
espacio, se encuentra un corazón tubular y vasos cangrejos. En su cuerpo se distingue el cefalotórax
sanguineos abiertos por los dos extremos al hemo­ y abdomen, provistos de numerosos apéndices y
cele. Igual que en la mayoría de los invertebrados, el por lo menos, de cinco pares de patas natatorias.

u
sistema nervioso es de tipo ganglionar, con una Existen pequeños crustáceos que fonnan parte del
comisura anterior, el cerebro, conectado a dos ner­ plankton y son hospederos intennediarios de hel­
vios ventrales de los cuales emergen filetes nervio­ mintos del hombre y de los animales, como ciertas
sos para cada metámero. El aparato digestivo consta especies de Cyclops (Dracunculus medinensis y
,/:
!• I de una parle anterior quitinosa fonnada por la cavi­
dad bucal, una faringe muscular, el esófago y el
Gnathostoma spinigerum), Cyclops y Diaptomus
(Diphillobothrium spp. y Spirometra spp.). Entre
I! proventriculo en donde se trituran los alimentos, el los decápodos son importantes los cangrejos que
Íl·I intestino medio no quitinoso para la digestión y sirven como hospederos intennediarios deParagoni­
1 absorción, y un intestino posterior que contiene las mus spp.
¡:; deyecciones. Presentan musculatura estriada y los
!
'1 sexos son separados. Arácnidos. Son artrópodos principalmente acuá­
lI I
Jt.i
¡ Los principales artrópodos de interés médico ticos que se han adaptado a la vida terrestre y que
1,
comprenden a las arañas, escorpiones, garrapatas y
¡j '1 ácaros. Al estado adulto presentan cuatro pares de
:;l' l TABLA50-l
patas, dos pares de piezas bucales y carecen de
l, antenas. La cabeza y el tórax están fusionados, for­
.,. ,' ARTROPODOS DE PRINCIPAL INTERES MEDICO mando el cefalotórax en arañas y escorpiones, mien­
: I'''
,
1'
tras que en garrapatas y ácaros fonnan, junto con el
Tipo Clase Orden Ejemplos abdomen, una sola masa corporal.
'·1''j·
,,:
Las garrapatas y los ácaros son parásitos por sí
,,,ij¡ Díptera Moscas, mos-
1¡, mismos o son eficientes hospederos y transmisores
,, ;¡: 1
Blattaria
quitos
Cucarachas
de enfennedades; y las arañas y escorpiones, por la
,· ponzoña que pueden inocular, provocan graves
1.1, Triatomideos cuadros clinicos.
i lnsecta Hemlptera
(vínchuca)
1

1,1
1

!1
Siphonaptera Pulgas Insectos. Son artrópodos terrestres que respiran
1 ! por medio de tráqueas, con cuerpo claramente divi­
1j' :, Arthropoda Anoplura Piojos
,Í ·' li dido en cabeza, tórax y abdomen. Presentan un par
,¡. ¡i
;
Arañas de antenas, tres pares de piezas bucales (con un par
,¡, Arachnida Scorpionida Escorpiones fusionado), tres pares de patas y dos pares de alas
iu
:!1:,i1
Acarina Acaros, garra- (que secundariamente se pueden perder).
Los insectos de importancia médica son los
'!i :¡11J
:1: Crustacea Copepoda
patas
Cyclops,
dípteros (mosquitos, tábanos y moscas), hemípteros
(triatomas, chinches), anopluros (piojos), sifonáp­

1¡i'¡,l,,,¡l, l:I¡,:
Diaptomus teros (pulgas), blatarios (cucarachas), etcétera:
'¡1,1,
•I)'

j'.;¡-)¡
4.46 PARASITOLOG/A MEDICA CARACTERISTICAS GENERALES DE LOS ARTROPODOS 447
]
i

Figura 50-2. Ciclo de desarrollo de los insectos. Metamorfosis incompleta, gradual o desarrollo hemimetabólico en que
se distinguen tres estadios (huevos, ninfas y adultos), en los cuales los estadios ninfales son de aspecto semejante a sus
4 progenitores, comparten el mismo hábitat y tienen alimentación similar (Hemiptera, Anoplura).

::,,.
Figura 50-1. Características generales de los principales grupos de artrópodos: ( l ) Crustáceos: dos segmentos
En la metamorfosis completa, hay cuatro esta­ <lucidas por parásitos, bacterias, rickettzias, espiro­
corporales (cefalotórax y abdomen), cinco o más pares de patas, hábitat acuático, principalmente. (2, 3 y 4) Arácnidos:
Dos segmentos corporales (cefalotórax y abdomen) en Araneae (2) y Scorpionida (3), uno solo en Acarina (4), cuatro pares dios: . huevo, /arva,,,P(ípa y adulto. Al nacer, son quetas, hongos y virus, algunos d� los cuales tienen
I' de patas, ápteros y de hábitat terrestre. (5) Insectos: tres segmentos corporales (cabeza, tórax y abdomen), tres pares de totalmente diferentes a sus padres y no adquieren alta tasa de morbilidad y de mortalidad, tal como se
patas, la mayor parte de los alados, con hábitat principalmente terrestre. gradualmente la forma de ellos. Las larvas tienen estudiará en detalle en los próximos capítulos.
"I'
Í' un aspecto vermiforme, y con respecto a los imagos,
viven en sitios distintos y tienen hábitos alimenti­ Prod11ctores de enfermedad
:11 cios diferentes. Cumplido el crecimiento y desarro­
!.
Mudas o ecdisis ciendo en las sucesivas mudas, cada vez más pare­ llo de la larva en sus sucesivas mudas, comienza Los artrópodos pueden llegar a enfermar al hom­
cidas a sus progenitores. Entre los insectos existen tina etapa quiescente conocida como pupa, en la bre mediante diversos mecanismos:
Si bien la cutícula les confiere muchas ventajas tres tipos de desarrollo; en los más primitivos cual, por acción hormonal, se produce la transfor­
a los artrópodos, también les acarrea problemas, (Apterygota) se verifica un crecimiento directo de mación total del insecto, con la desaparición de casi Acción parasitaria per se. Como ocurre con la
como es el crecimiento del animal encerrado en una un insecto recién nacido prácticamente igual a sus todas las estructuras de la larva y la neoforrnación sama producida por Sarcoptes scabiei, la tungosis
envoltura rígida y no extensible. La solución para el progenitores y sólo le resta crecer en cad_a muda. de órganos muy distintos a los anteriores. El tiempo ("nigua" o "bicho do pé") infestación por la pulga
desarrollo y crecimiento se ha encontrado en las En cuanto a los insectos Pterygota, que son los que para esta total reorganización a veces es asombro­ Tunga penetrans y las myiasis o parasitación por
sucesivas mudas o ecdisis, es ·decir, la eliminación nos interesan en parasitología, todos son meta­ samente corto: alrededor de una semana en las larvas de moscas.
de la cutícula que es reemplazada por una nueva mórficos que claramente siguen dos líneas de de­ moscas o menos de 24 horas en los mosquitos. La
surgida gracias a un complejo mecanismo honno­ sarrollo: una metamorfosis incompleta gradual o pupa puede ser desnuda como ocurre en los mosqui­ Inoculación de ponzoña. Mordeduras y picadu­
nal. El crecimiento del artrópodo se produce duran­ desarrollo hemimetabólico y una metamorfosis tos, con·serva la última cutícula larvaria como un ras de arañas, escorpiones, garrapatas, himenópte­
te los períodos entre las mudas, cuando la nueva completa o desarrollo holometabólico (Figuras 50- estuche protector que se denomina puparía, como ros, etcétera.
cutícula todavía no se endurece. 2 y 50-3). ocurre en la mosca doméstica, o permanece dentro
En la metamorfosis incompleta o gradual, se de un capullo formado por la larva tal como se Acción de partes de artrópodos. Provocado por
Desarrollo distinguen tres estadios: h11evo, ninfas y ad11/to. De observa en las pulgas. aguijones de abejas y avispas o restos de ectopará­
los huevos nacen las ninfas, las cuales, en cada
Importancia médica sitos que no han sido retirados en forma adecuada
De los huevos de los artrópodos surgen esta­ muda, son más parecidas a los progenitores, com­
como son hipostomas y quelíceros de garrapatas o
dos juveniles que siguen diversos y complejos tipos parten su mismo hábitat y tienen una alimentación
Los artrópodos tienen un importante papel en la larvas de moscas, los que provocan cuadros muy
de desarrollo. En los crustáceos, la larva o naup/ius similar. Se ·observa en varios órdenes de insectos
dolorosos e infección secundaria.
nace con escasos apéndices, los que se van enrique- (Hemiptera, Anoplura, etc.). producción y en la transmisión de infecciones pro-
-448 PARAS/TOLOGIA MEDICA CARACTERISTICAS GENERALES DE LOS ARTROPODOS

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Imngo Chandler AS, Read CP. Introducción a la Parasitología. domesticated animals. 7'' ed. London: Bailliere Tyndall
·� Barcelona: Ediciones Omega, 1965. IH�
� Pupa Huevos'

'Larvalll

Figura 50-3. Ciclo de desarrollo de los insectos. Metamorfosis completa o desarrollo holometabólico con cuatro estadios
(huevos, larvas, pupas y adultos), en los cuales las larvas son de aspecto vermiforme totalmente diferente a sus padres
y viven en sitios distintos y tienen hábitos alimenticios distintos; después de sucesivas mudas, las larvas dan origen a
p�p?s, estados quiescentes de los que emergerán los adultos (Dípteros).

Acción de hipersensibilidad. Producida por la vectores mecánicos son la mosca doméstica y las
picadura de insectos del género Hymenoptera (abe­ cucarachas, las cuales se contaminan con el agente
jas, avispas, avispones) y del género Solenopsis infeccio�o y lo transportan inalterado hasta el hom­
(honnigas) que provocan reacciones de hipersensi­ bre, sus alimentos o sus utensilios.
bilidad de diversa gravedad.
Vector biológico. El agente infeccioso se multi­
Transmisores de enfermedad (vectores) plica y fonna parte ineludible de su ciclo evolutivo.
Entre los mecanismos más eficientes para la trans­ Los principales vectores biológicos son insectos
misión de enfermedades están los objetos hematófagos (dípteros, hemípteros), los cuales se
inanimados y animados que transportan la infección infectan al picar al hospedero infectado; el agente se
desde su fuente de origen o reservorio, hasta los multiplica eficientemente en su interior y luego los
hospederos susceptibles. Los objetos inanimados transporta hasta el hospedero susceptible, al cual
que cumplen esta función reciben el nombre genéri­ imperiosamente debe acudir para volver a alimentar­
co defomites como son el agua, el aire, las ropas de se.
• vestir, juguetes y, en fin, todo tipo de utensilios Esta distinción entre vectores mecánicos y vec­
domésticos. Los objetos animados o vivos de este tores biológicos es fundamental para entender la
transporte se conocen como vectores y principal­ dinámica de las enfennedades infecciosas: El vector
mente son insectos que acedian al hombre y a su mecánico es importante, pero no imprescindible para
entorno, impulsados por su necesidad de alimenta­ la transmisión. Si desaparecieran moscas y cucara­
,'

11¡!
ción o de procreación. Se distinguen vectores mecá­ chas seguirían existiendo la fiebre tifoidea, el cólera
o la amibiasis. En cambio, el vector biológico es
•,1

nicos y vectores biológicos.


I'
;¡1, imprescindible para la sobrevida del agente infeccio­
Vector mecá9ico. Transporta pasivamente en la so, porque representa una fase de su ciclo evolutivo.
¡!;t
1· superficie de cuerpo o en el interior de su tubo Si se eliminan los mosquitos Anopheles o las vin­
chucas, se controlaría integralmente la malaria y la

'· digestivo al agente infeccicisó; si� qué experimente
ningún cambio ni se multiplique. Los principales enfennedad de Chagas.

.. Capítulo 51 PARASITOLOGIA MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABANOS Y MOSCAS 451

DIPTEROS: de las larvas son los charcos, remanso de ríos 0


lagunas, caracterizados por la lenta renovación del

MOSQUITOS, TABANOS Y MOSCAS


agua y donde existe abundante vegetación· otras se
han adoptado a la más heterogéneas colec�iones' de
agua y se desarrollan en utensilios domésticos que
acu�ulan agua. No se desarrollan en las grandes
A NTONIO ATIAS comentes como son el centro de los ríos, lagos 0
mares.
La pupa es más obscura y tiene un aspecto de
coma o vírgula por poseer una gran extremidad
tanos o suelos húmedos que sufren inundaciones cefálica (larva megalocéfala). Se caracteriza por ser
Los dípteros son insectos provistos de dos pa­ móvil, aunque no se alimenta y al cabo de 2-5 días
res de alas, uno bien desarrollado y útil para el periódicas.
da origen al imago o insecto perfecto.
vuelo y otro par atrofiado, los halterios, cuya fun­ Los mosquitos tienen.importancia médica por­
ción es mantener el equilibrio durante el vuelo. Mosquitos (Familia Culicidae)
que, por una parte, constituyen plagas molestas que
Presentan un ciclo evolutivo completo o desarrollo provocan diversos grados de dermatitis, y, por otra,
holometabólico con sucesivos estadios de huevo, Los mosquitos son los insectos más importantes
son importantes vectores de enfermedades.
larva, pupa e imago. El tipo de alimentación es como vectores de enfermedades del hombre, además
diverso en la larva y en el adulto, lo que es de de ser los artrópodos hematófagos más comunes
Género Anopheles. Su gran trascendencia reside
importancia en el eventual rol de vectores de enfer­ (Figura 51-1 ). Se caracterizan por su abdomen largo
en ser vectores biológicos de la malaria. Actúa como
medades. Al orden Díptera pertenecen las moscas, y angos\o, patas muy largas en relación con el cuer­
hospedero definitivo de los plasmodios de la malaria
los tábanos y los mosquitos, de gran importancia po (de allí el nombre de zancudos), antenas plumosas
humana. Para el estudio de sus hábitos, principales
en el ámbito médico. en los machos y las hembras presentan un aparato Figura 51-2. Cabeza de culícido hembra: se observan 2
bucal adaptado para picar, perforar la piel y succio­ especies involucradas en el paludismo en América y
La cabeza es voluminosa y tiene gran movilidad antenas, 2 palpos maxilares, el labrum y 6 piezas del las medidas de control, véase el Capítulo 26: Mala­
de rotación respecto del tórax; presenta un par de nar sangre (Figura 51-2), mientras los machos care­ aparato bucal picador. ria.
ojos compuestos, las antenas y el aparato bucal cen de estas adaptaciones y se alimentan de jugos
adaptado ya sea para chupar (mosca doméstica) o vegetales. Las especies de mosquitos de importan­
cia médica pertenecen a la subfamilia Anophelinae Género Aedes (Figura 51-5). Estos mosquitos
para picar (mosquitos). El tórax tiene tres segmentos, agua (Figura 51-3). Los huevos miden 0,7 mm de tienen un radio de vuelo relativamente restringido y
de los cuales el segundo está muy desarrollado y en con el género Anopheles transmisores del paludis­
longitud; los mosquitos anofelinos y culicinos colo­ viven en la vivienda y el espacio perídoméstico cer­
él se insertan las alas aptas para el vuelo, las cuales mo, y la subfamilia Culicinae con los géneros Aedes
(vector de la fiebre amarilla) y Cu/ex (vectores de can sus huevos en el agua y los aedinos lo hacen en cano al hombre, el que constituye su principal fuente
brotan de yemas del interior del cuerpo el suelo, en terrenos con inundaciones periódicas. El de nutrición, aunque puede picar indistintamente a
(endopterigotos); el tercer segmento torácico posee diversas virosis y parasitosis).
número de huevos varía entre 100 y 400 por postura. diversos mamíferos. Constituido por más de quinien­
los halterios o segundo par de alas. Del tórax también El ciclo evolutivo de los mosquitos se caracteri­
za porque las etapas de su desarrollo ocurren en el Los de Anopheles sp. semejan botecitos por la pre­ tas especies, la de mayor trascendencia en el hemis�
nacen los tres pares de patas, las cuales están muy sencia de flotadores que impiden que se sumerjan, ferio occidental esAedes aegypti. Su ciclo evolutivo
desarrolladas y constan de coxa, trocánter, fémur,
los de Aedes sp. son de estructura poligonal y los de se caracteriza por su capacidad de desarrollo en
tibia y tarso provisto de un par de uñas. El abdomen
Cttlex sp. son colocados en grupo, con una corona en pequeñas colecciones de agua que se forman en
contiene los órganos internos y, especialmente, el forma de copa. Maduran entre 3 y 7 días según la relación con la actividad del hombre y de su entorno,
complejo aparato reproductor que es muy desarrolla­
temperatura del agua (Anopheles y Culex) y los de como son estanques de agua, barriles, floreros, parte
do. Aedes no maduran hasta que el suelo que los contie­ interna de neumáticos en desuso, etc. Según la tem­
El orden Díptera presenta tres subórdenes: ne no es inundado. peratura ambiente, en alrededor de diez días comple­
Nematocera (mosquitos, simúlidos, flebótomos, ta su desarrollo.
La larva de aspecto vermiforme, mide alrededor
culicoides, etc.), Brachycera (tábanos) y Cyclorrapha La mayoría de las especies de Aedes tienen ac•
de 1 cm. La cabeza voluminosa contiene los ojos
(mosca doméstica). tividad diurna o crepuscular y su importancia mé­
compuestos y el aparato bucal masticador. El abdo­
men está formado por ocho segmentos y tiene dos dica radica, al igual que en otros mosquitos, en que
SUBORDENNEMATOCERA espiráculos. La extremidad posterior de CulexyAedes pueden llegar a constituirse en una molesta y per­
presenta el sifón respiratorio, no así la deAnopheles; sistente plaga por las picaduras, pero, sobre todo,
. Son dípteros caracterizados por poseer antenas por su rol como vectores biológicos de enfermeda­
por el19 esta última larva debe disponerse horizontal­
filiformes muy segmentadas y muy plumosas, espe­ des. Aedes aegyptis. es el principal vector de fiebre
mente a la superficie del agua y las otras dos, gracias
cialmente en los machos. amarilla, virosis aguda, de gravedad variable, carac­
al sifón, adoptan una posición oblicua con dicha
Poseen alas transparentes y provistas d� mu­ terizada por un síndrome febril intenso y un síndro­
superficie (Figura 51-4). Las larvas se alirnentan del
chas venas, cuya disposición se utiliza para la clasi­ me hemorragíparo que puede alcanzar una elevada
planckton y se mueven desordenadamente bajo el
ficación. Sus larvas son muy activas, con una cabeza agua, pero periódicamente deben subir a la superfi­ mortalidad. La fiebre amarilla es prevalente en regio­
bien desarrollada y las pupas pueden ser móviles y nes selváticas tropicales y en regiones subtropicales
cie para respirar. Presenta cuatro mudas en su desa­
nadar activamente. La mayoría de los ciclos evoluti­ a !_as cuales haya alcanzado el Aedes aegyptis. El
rrollo que dura, según la temperatura del agua, unas
vos de los nematóceros tienen estados larvales y
tres semanas. mosquito al picar a monos y otros animales
pupas que se desarrollan en el agua, o bien en pan- Figura 51-1: Morfología externa de los culícidos. que sirven como reservorios, adquiere la in-
Los sitios acuáticos preferenciales de desarrollo
..
-452 PARASJTOLOGIA MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABANOS Y MOSCAS 453
; 1
! : · Flebotomos (Familia Paychodidae,
c==:::>HUEVO Subfamilia Plzlebotominae)

Son dípteros de color obscuro,de pequeño tama­


ño (2 a 3 mm de longitud),de aspecto frágil,joroba­
dos, cubiertos de pelos hirsutos en todo el cuerpo
y las alas, de largas patas peludas muy delgadas
(Figura 51-6). Presentan una actividad crepuscular 0
nocturna. La hembra se alimenta de jugos vegetales
' 1, ••
y de sangre de diversos animales, incluido el hom­
�:•· N . .
bre. El macho sólo se alimenta de jugos vegetales y
no es hematófago.
Tienen un escaso radio de vuelo y si no sopla el
viento,permanecen inactivos y se guarecen en grie­
Figura 51-4. Larvas de culícidos con él sifón respiratorio tas,madrigueras de animales y lugares obscuros con
en la superficie del agua. alta humedad y desechos orgánicos,sitios propicios
para que la hembra deposite unos cincuenta huevos
por postura, puesto que en su ciclo evolutivo no
cialmente en estanques, canales y otras obras de requiere de condiciones acuáticas para su desarro­
PUPA regadío. Además de las molestias provocadas por llo. La larva que emerge del huevo es fina; blanca,
sus picaduras, son vectores biológicos de virosis provista de mandíbulas masticadoras y se alimenta
y parasitosis. Las especies más comunes son C11lex de detritus orgánicos. Presenta cuatro mudas y re­
pipiens y C. tarsalis. Tienen hábitos nocturnos. quiere entre dos y diez semanas para la pupación. El
Estos zancudos son vectores de la · encefalitis desarrollo de la pupa que es desnuda, es de unos
equina y la encefalitis de Saint Louis. La encefalitis diez días.
equina es una virosis que afecta principalmente a las En el viejo mundo prevalecen dos géneros de
aves como una infección prácticamente asintomáti­ flebótomos: Phlebotomus y Sergentomyia; y en
ca, pero puede ser adquirida por otros hospederos, América, el género L11tzomyia, con un total de más
como el caballo y el hombre. El caballo es susceptible de cincuenta especies,es capaz de transmitir al hom­
con altos índices de mortalidad; en el hombre, no bre la Ieishmaniosis, la bartonellosis y algunas in­
suele ser tan severa, excepto cuando ataca a los fecciones virales: En América Latina la leishmanio­
niños. C11/ex pipiens es vector de filariosis sis visceral y cutánea es transmitida principalmente
(Wuchereria bancrofti y Dirojilaria immitis). por Lutzomyia longipalpis. Los flebótomos son 1ra:
lados con mayor amplitud en el Capítulo 27: Leish­
maniosis.
La bartonellosis o enfermedad de Carrión es pro­
vocada por una bacteria, Bartonella baciliformis,
prevalente en la región andína del Perú,Ecuador y
sur de Colombia. La infección es transmitida por
Lutzomyia verrucan1m y probablemente por L. co­
ADULTOS EN
lombiana (Figura 51-7), y tiene dos modalidades
POSICION DE clinicas: la Fiebre de Oroya y la verruga peniana.
DESCANSO La fiebre de Oroya es la forma generalizada de la
,¡ infección y se caracteriza por fiebres elevadas y
CULICINOS mantenidas,dolores óseos,musculares y articulares,
ANO FELINOS AEOINOS anemia e ictericia, sintomatología que en ocasiones
puede ser fatal. La verruga peruana es la forma cu­
Figura 51-3. Formas de desarrollo de Anofelinos, Culícidos y Aedinos. Comparación de huevos, larvas, pupas e imagos.
tánea de la infección, con lesiones eruptivas y
Además, adultos en posición de descanso.
adenopatías,de curso afebril. Esta enfermedad debe
su nombre a Daniel Carrión, el cual se inoculó el
fección y luego de un período de incubación de den transmitir otras virosis como el dengue y la mic�oorganismo obtenido de una paciente con ve­
alrededor de doce días, la trasmite al hombre sus­ fiebre hemorrágica e_pidémica. rruga peruana y desarrolló la fiebre de Oroya. Antes
ceptible por medio de su saliva y puede hacerlo de fallecer por esta enfermedad, reconoció que las
durante toda su vida,tres a cuatro meses,puesto que Género Culex, Son los mosquitos mas comunes dos .entidades clinicas eran expres.ión de una misma
es inmune a la virosis. y de distribución cosmopolita. Se desarrollan en enfermedad.
Además, los mosquitos del género Aedes pue- aguas estancadas ricas en materia orgánica, espe- Figura 51-5. Aedes aegypti en posición de picar. La fiebre papatasi o fiebre de tres días, es una
-454 PARASITOLOG/A MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABANOS Y MOSCAS 455

infección viral transmitida por Phlebotomus papa­ Jerjeles o polvorines (Familia Ceratopogonidae)
tasi en el viejo mundo y por especies del Género
Latzomyia en América. Produce una enfermedad Son muy pequeños, a menudo miden menos de
febril de corta duración, que no es fatal, pero que se I mm de longitud. Las hembras hematófagas pican
acompaña de una larga convalescencia con marca­ al hombre y muchos animales, y tienen gran versa­
da astenia. Curiosamente la infección es transmiti­ tilidad para colocar los huevos, de modo que las
i da por flebótomos hembras y machos, pero como larvas pueden ser acuáticas, subacuáticas o desarro­
éstos no son hematófagos, se sospecha que pudiera llarse en el suelo, cortezas de árboles, etc., lo que les
haber una transmisión transovárica del virus. asegura una amplia distribución geográfica. Más de
50 géneros se alimentan de insectos y sólo cuatro
B Jejenes (Familia Simu/idae) atacan a mamíferos: Culicoides (con más de 800
especies), Forcipomyia, Austroconops y Leptoco­
Los simúlidos, conocidos como jejenes o mosca nops.
negra, son pequeños ( 1-5 mm), de color negruzco, Como plaga, se caracterizan por atacar en en­
de patas cortas y con aspecto de jorobados ya que el jambres con gran ferocidad, provocando molestias
tórax sobrepasa la cabeza, debido a una contracción - y poniendo en peligro más de un resort turístico.
de la parte ventral del tórax. También en estas fa­ Pero también son importantes como vectores de
milias de insectos, la hembra es hematófaga y colo­ filariosis en Africa (Mansonella perstans y D.
ca entre 200 y 500 huevos que deposita en la super­ streptocerca) y de Mansonella ozzardi en Centro y
¡ ficie de aguas relativamente profundas, se hunden
y dan lugar a larvas que quedan enganchadas a la
Sudamérica.

vegetación subacuática. Las pupas permanecen den­ Control de mosquitos


tro de un .capullo con largos filamentos (Figura
51-8). El control de mosquitos está lejos de haber sido
Los simúlidos son los vectores biológicos de resuelto, debido a las implicancias biológicas y
Onchocerca volvulus. Al ingerir sangre con micro­ ecológicas de los insectos y su entorno, así como
filarias, éstas se diseminan en el tórax del insecto, a las costumbres y hábitos del hombre. Básicamen­
evolucionan a larvas que migran hacia la probóscide te en el control debe considerarse aquella antilarval
y de ese modo, son transmitidos al próximo hospe­ y la lucha contra los insectos adultos.
dero. La infección es· prevalente en América, Asia
y Africa y es transmitida por diversas especies de Lucha antilarval. Como el desarrollo de las
Figura 51-6. Familia Psychodidae. Etapas de la metamorfosis de Ph/eboto11111s spp. (A) Adulto y (B) Huevo. (C) Larvas. Simulium, tema que se desarrolla en el Capítulo 35: larvas requiere del agua, las medidas más impor­
Oncocercosis. tantes de esta lucha radican en la eliminación de

"---·
A e D

Figura 51-7. L11tzomyia verr11car11111, vector de Bartonella baci/iformis. (Cortesíá del Dr. Marshall Hertig). Figura 51-8. Etapas de desarrollo de Simuliidae: (A) Adulto; (B) Huevo; (C) Larvas; y (D) Pupas.

¡,
1
"456 PARASITOLOGIA MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABANOS I' MOSC,4S
457

pantanos y aguas estancadas que muchas veces a) Su picadura es muy dolorosa por el gran tama­
necesita de importantes obras de ingeniería para ño de sus piezas bucales. A nivel del ganado, la
lograr escurrir las aguas. Si bien la eficiencia de pérdida de sangre por las picaduras provoca ingen­
estas obras es importante, su costo es elevado y tes pérdidas económicas por la menor producción de
muchas veces requiere el consenso de los gobier­ carne y leche.
nos para llevarlos a cabo. b) Como vector es capaz de transmitir parásitos,
También es importante el rociamiento de charcos bacterias y virus a lós animales y al hombre. A este
y pantanos con Iarvicidas, como el petróleo o el último, tábanos del género Chrysops ( Chrysops dimi­
verde de París (sal doble de arsenito y acetato de dia/a y C. silacea) son hospederos intermediarios
cobre), que se esparcen como una fina película en la de la filaría Loa loa. Los tábanos se infectan al ingerir
superficie del agua, impidiendo la respiración de las microfilarias circulantes y en su musculatura torácica
larvas y su consiguiente muerte. Sin embargo, su evolucionan a estados larvarios que serán transmi­
empleo debe estudiarse muy bien por su eventual tidos al hospedero susceptible.
efecto sobre otros seres vivos que pudiera poner en
peligro el equilibrio ecológico. Por eso se ha busca­ Control de tábanos. Es muy díficil, sino imposi­
do métodos biológicos de control de larvas de mos­ ble, un control eficaz contra los tábanos. Para la
quitos con el empleo de peces larvívoros como lucha antilarval, se recomienda obras de drenaje de
Gambusia sp., lo que se utiliza en estanques y pile­ pantanos u otras colecciones de agua, como asimis­
tas donde pueda permanecer una población estable mo cubrir la superficie de las aguas que son fuentes
de estos peces. de cría, con película de petróleo, verde de Paris o
insecticidas.
Lucha contra los insectos adultos. Se efectúa en
la vivienda y en el peridomicilio. En estos casos, está SUBORDENCYCLORRAPHA
indicado el rociamiento de paredes y techos con
insecticidas con efecto residual prolongado. Los Está constituido por una variedad de moscas con
insecticidas más usados son los derivados del píretro, capacidad para actuar como vectores mecánicos o
hidroclorados y organofosforados; sin embargo, cada biológicos y como productores de enfermedad
día es más dificil usar esta arma de lucha antimaginal (myiasis) de gran trascendencia médica. Eiitas mos­
por la creciente resistencia a la acción química de cas miden 6-7 mm de longitud y se caracterizan por
estos insecticidas. Es por ello que se hacen esfuer­ presentar una cabeza relativamente grande, ovoide,
zos para el desarrollo del control químico, físico o aplanada en el plano frontal y gran capacidad de
biológico, como son el uso de sustancias abrasivas rotación. Tienen antenas cortas, ojos grandes fa­
sobre la cutícula de los insectos para provocar su celados ó compuestos y sus pinzas bucales pueden
dehidratación y muerte, la esterilización por irradia­ ser de dos tipos, según su proboscis. Puede presen­ B
ción y otras medidas que sólo están en etapa expe­ tarse como una trompa blanda y extensible apta para
rimental. succionar el alimento (mosca doméstica), o bien es
Otras medidas eficaces son aquellas que protejen rígida, dura y adaptada para picar (moscas
a las viviendas, como son el uso de mallas metálicas hematófagas como Glossina y Stomox:ys) (Figura 51- STOMOXYS MUSCA
o plásticas para ventanas y puertas, y el uso de 9). El tórax es macizo del cual emergen las alas y las CALCITRANS DOMESTICA
mosquiteros para las camas. patas, y el abdomen es globuloso formado por cua­
tro a nueve segmentos que contienen los órganos Figura 51-9. IZQUIERDA. Detalle de la cabeza de las moscas: (A) Cabeza y trompa chupadora de Musca domestica
SUBORDENBRACHYCERA internos. Como todos los dípteros, presentan un (trompa extensible, blanda, de función chupadora) y (B) de Stomoxys calcitrans (rígida, dura, proyectada en bayoneta
ciclo evolutivo completo o desarrollo holometabólico hacia adelante, de función picadora (hematofagia). DERECHA. Moscas en el acto de alimentación: (A) Musca
Tábanos (Familia Tabanidae) con estadios de huevo, larva, pupa y adulto. domeslica con trompa chupadora; y (B) Stomoxys calcitrans con trompa picadora.
Las moscas atentan contra la salud del hombre
Son moscas relativamente grandes, robustas, de de diversa manera: d) Myiasis: producción de enfermedad por lar­ en condiciones corrientes del verano (Figura 51-10).
color grisáceo. Las hembras son hematófagas y a) Molestias derivadas de su actividad alrededor vas de moscas. Los huevos, de forma oval, pequeños, blancos, de
colocan entre 100 y 800 huevos adheridos a piedras del hombre (mosca doméstica), lo que disminuye su aproximadamente I mm de longitud, son deposita­
o vegetales cercanos al agua. Las larvas emergen en capacidad de trabajo, al perder tiempo espantando o Musca domestica dos por la hembra en grupos de 75 a 150 en cinco
unos siete días y caen al agua o se sumergen en el matando moscas. a siete posturas. Los huevos son colocados en hen­
lodo; luego de cinco a siete mudas que pueden b) Vectores mecánicos: la mosca doméstica pue­ Es uno de los insectos más ampliamente distri­ diduras y grietas de los criaderos, lejos de la luz.
prolongarse hasta alrededor de_ un año, migran a de llevar el agente infeccioso desde su reservorio (v. buido y es el que está más frecuentemente asociado Los huevos se rompen doce a veinticuatro horas
lugares más secos, se transforman en pupas que en gr.: heces) hasta el hombre o sus alimentos. al hombre, acompañándolo por toda la tierra, con la después de la postura, durante los meses de verano.
una a tres semanas dan origen a los imagos. c) Vectores biológicos: ocurre con las moscas sola excepción de- los territorios ártico y antártico, La larva tiene un aspecto vermifonne, blanque­
Su importancia médica y veterinaria es de dos hematófagas capaces de transmitir microorganismos y zonas de extrema altitud. cino y muy móvil. Peñetra en seguida en el material
órdenes: y parásitos (G/ossina spp). Las etapas de desarrollo requieren de 8 a 20 días de cría usando sus dos ganchos de la boca o ese/e-
·458 PARAS/TOLOGIA MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABA NOS Y MOSCAS 459

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LARVA

Figura 51-10. Ciclo evolutivo (metamorfosis completa) de Musca domestica.

ridios, para rasgar las materias alimenticias y abrir­suele ser un excelente medio de reproducción, sea
se paso. Las tres etapas del estado larval requieren estiércol de caballo o de otros animales. Otro tanto
de 3 a 24 días o más, pero en el período de calor es ocurre con el excremento humano; de allí que abun­
de sólo 4 a 7 días. Cuando se ha completado su den moscas en donde existen letrinas mal construi­
periodo de crecimiento, la larva migra a lugares das que dejan expuestas las deposiciones. En el área
más secos para convertirse en pupa. urbana la gran fuente de moscas son,las basuras y
puede constituir un problema si los desperdicios no Figura 51-11. Las moscas como vectores de enfennedad.
Al contraerse la larva fonna una vaina pupa!
que encierra a la pupa, la cual es inmóvil y no se son bien almacenados (en tarros bien tapados).
alimenta. Este estado dura de tres a cinco días a La mosca adulta es muy activa moviéndose de Habitualmente vive alrededor de un mes. ciente migración de población rural hacia las ciudac
temperaturas elevadas o varias semanas si la tempe­ un lugar· a otro, incesantemente, durante el día. Las moscas pueden transportar los agentes in­ des, muchas veces con bajo estándar de vida, haci­
ratura es baja. Provista de un gran olfato, la atraen los fuertes fecciosos en las piezas bucales, por medio de su namiento y acumulación de basurales, todo lo· cual
Cuando se ha completado el desarrollo emerge olores, sean de heces, de sustancias orgánicas en vómito, en los pelos del cuerpo y las patas, en las mejoró y aseguró la exitosa sobrevida de la mosca.
la mosca del pupario y al cabo de unas quince horas descomposición o leche y otros alimentos del hom­ almohadillas viscosas de sus patas y por medio de Como la mayor importancia médica de la mosca
alcanza su completa actividad. Desde ese momento, bre. Asi obtiene su alimentación de diversas fuen­ las deyecciones. Estos son los mecanismos por los radica en su eficiente capacidad como vector mecá­
el apareamiento ocurre en cualquier instante. tes. Para ingerirlo, el alimento debe estar líquido o cuales puede transmitir enterobacteriáceas (tifo nico, es conveniente referirse a su control que bási­
Durante la estación de calor se pueden producir fácilmente soluble con la saliva. El agua es esencial idea, paratifoidea, disentería bacilar, diarreas infan-_ camente implica medidas para detectar y destruir
dos o más generaciones de moscas por mes. Debido y no puede vivir mucho tiempo sin ella. Necesita tiles, etc.), enteroparasitosis (amibiasis, giardiasis, sus criaderos o focos de proliferación, impedir su
a lo rápido del desarrollo y el gran número de hue­ azúcar y almidón para una vida prolongada y pro­ ascariasis, tricocefalosis, etc.), y enfermedades vi­ contacto con los reservorios o fuentes de infección
vos producidos por las hembras, las poblaciones de teínas para la producción de huevos. Por ello, se rales (polio, etc.) (Figura 51-1 1 ). y evitar su contacto con la casa, sus enseres y ali­
moscas aumentan en la primavera y el verano, al­ alimenta dos o tres veces al día.'Al posarse sobre un mentos.
canzando el máximo a fines de esta estación y al alimento, lo palpa con la trompa y regurgita varias Control de la mosca doméstica. Desde los al­
comienzo del otoño. Los huevos y larvas tienen veces, dejando manchas de color pajizo conocidas bores de la humanidad, la presencia de la mosca en Saneamiento ambiental. Sin duda es la princi­
poca resistencia al frío y no son viables. Las moscas como manchas de vómito, las que alternan con el entorno del hombre ha sido constante, acompa­ pal medida en la lucha contra las moscas. En el
adultas se mantienen bien a temperaturas entre 10 manchas obscuras que son deyecciones. Estas man­ ñándolo en todas sus actividades, penetrando a su ámbito del hogar, primariamente sus habitantes
y 15 ºC, pero a grados más bajos se acorta consi­ chas de vómito y fecales alternan en los utensilios casa y posándose en sus utensilios y alimentos. Los deben procurar el aseo de la casa y de sus dependen­
derablemente su promedio de vida. En los trópicos y habitación del hombre (muros, paredes, techos, basurales· y cualquier otro sitio de depósito de ma­ cias, la limpieza del suelo y otros sitios susceptibles
y zonas subtropicales la multiplicación continúa cordones eléctricos, vidrios, etc.). terias orgánicas en descomposición, constituyen los de acumular estiércol, restos de comida o cualquier
todo el año, no asi en las zonas templadas; en ellas Las moscas tienen ciertos lugares de descanso focos de crianza o "maternidades" de las moscas. otro elemento orgánico en descomposición, arre­
las moscas domésticas se guarecen en ambientes dentro de la casa (paredes, techos, botes de basura, Antes era inevitable la presencia de moscas, porque glar pozos negros y letrinas en mal estado, etc. La
protegidos y con una procreación semicontinua. etc.). En la noche permanecen inactivas. En el medio se criaban en las heces del hombre o en caballerizas basura recogida debe disponerse en bolsas plásticas
Los sitios de crianza están con.stituidos, por .. exterior, descansan cerca de sus lugares de repro­ y establos. Luego, el gran auge industrial trajo por o tarros basureros herméticos. A su vez, las autori­
cualquiera materia orgánica húmeda y cálida que ducción. Generalmente, las moscas se desplazan consecuencia la producción'de inmensos depósitos dades municipales son responsables del retiro do­
suministre alimento a las larvas. El abono animal hasta un kilómetro de su sitio de reproducción. de desechos orgánicos, a lo que se sumó una ere- miciliario de las basuras y su ulterior destino y
"460 PARASITOLOGIA MEDICA DJPTEROS: MOSQUITOS, TABANOS Y MOSCAS 461

tratamiento sanitario en los grandes depósitos o la mosca, enfatizando su peligroso rol como vector
vertederos que rodean a las ciudades. mecánico. Esta acción educativa debe abarcar a toda
Insecticidas. Cuando se emplea un moderno la comunidad, pero principalmente a nivel escolar.
insecticida organoclorinado u organofosforado se Sus contenidos debieran incluir preceptos de higie­
produce una rápida disminución de moscas por sus ne que fueran posibles de cumplir: adecuada dispo­
efecto letal. Sin embargo, siempre sobreviven algu­ sición de las basuras, impedir la entrada de moscas
nos ejemplares naturalmente resistentes a la acción a la casa, proteger y cubrir con un paño alimentos
del insecticida y como esta cualidad es hereditaria, o biberones, usar mosquiteros para proteger la cuna
al poco tiempo las nuevas generaciones de moscas de los niños, el uso racional de insecticidas contra
1
son resistentes y de este modo, se restablece la po­ los imagos que hubieran ingresado al hogar, etcéte­
blación inicial. Este es, en síntesis, el drama histó­ ra.
rico vivido con el uso de insecticidas contra las
moscas. Por ello, actualmente debiera considerarse Stomoxis calcitrans
a los insecticidas como una arma de segunda linea,
útil para el exterminio de moscas adultas en la casa Mosca hematófaga, parecida a la mosca domés­
y otros recintos cerrados. tica, provista de piezas bucales rígidas apropiadas A B e o E
Control mecánico y fisico. Tiene por objeto para picar. Es muy voraz, se la conoce como "mosca
obstaculizar el ingreso y la pululación de moscas en de los establos" y su presencia es intolerable cuando Figura 51-12. Aspecto de las larvas de diferentes clases de moscas: (A) Dermotobia l,ominis, primer estado larval.
la vivienda. En este aspecto, la medida más eficaz atacan en gran número al hombre, lo que puede (B) Callitroga americana. (C) Eristalis tena.,. (D) Sarcophaga crassipalpis. (F) Gasterophilus haemorrohida/is.
es la colocación de mallas de alambre fino en puer­ hacer peligrar el turismo, y es una grave plaga para
tas y ventanas. Otras medidas complementarias son el ganado. Su desarrollo es perídoméstico, en rela­ pallidipes) y son vectores de T.b. rlzodesiense. toriamente deben cumplir una fase parasitaria en
el empleo de trampas, la electrocución, el uso de ción con los animales que acompañan al hombre La mosca se infecta al ingerir sangre del hombre animales, incluido el hombre.
papeles engomados o de cintas delgadas y múltiples (caballerizas, establos, porquerizas), donde se re­ o animal infectado. Los tripomastigotos se multipli­
colgadas del dintel de las puertas, etcétera. produce en relación con la paja, excremento y otras can en el intestino medio y, en diez a veinte días, Dermatobia /10111i11is. Es una mosca relativa­
Control biológico. Es un tema apasionante por­ sustancias orgánicas en descomposición. Rara vez migran hacia el intestino anterior, invaden las glán­ mente grande, de coloración café obscuro y abdo­
qt¡e, al contrario del uso de insecticidas, podría ser penetra a la habitación del hombre. dulas salivales y están en condiciones de ser inocu­ men azul metálico, prevalente en América latina.
una solución "limpia" para el control de moscas. Su importancia médica radica en las molestias lados en el próximo hospedero. (Ver Trypanosoma Debido a que posee pinzas bucales atrofiadas y no
Los insecticidas agreden el equilibrio ecológico por ocasionadas por su picadura, pero no se ha descrito brucei en el capítulo 44: Otras parasitosis de los aptas para picar, presentan un ciclo evolutivo muy
su potencial acción tóxica contra otras especies de como vector biológico de ninguna infección; en tejidos). particular: la hembra captura insectos hematófagos
insectos útiles o de animales y del hombre, además cambio, en los animales, además de constituirse en durante el vuelo, sobre los cuales coloca los huevos;
de su persistencia por años o décadas en el medio una plaga, es vector biológico de la surra, producido Myiasis cuando el insecto portador pica a un animal de
exterior y la contaminación de vegetales, leche y por el Trypanosoma evansi. sangre caliente, los huevos se abren por una aber,­
carne con efecto acumulativo para quienes los con­ Es la parasitación de los tejidos del hombre y de tura opercular y emergen las larvas que se in�odu­
sumen. Glossina spp. los animales por larvas de moscas (Figura 51-12). cen por la piel, horadando hacia la capa dérmica,
Se han utilizado ejemplares criados en el labo­ Durante su ciclo evolutivo, las moscas pueden pro­ pero dejando una abertura para asegurarse la respi­
ratorio de Callitroga (Isla Curazao) y de Glossina Importante género de moscas hematófagas, co­ vocar esta situación en forma obligatoria o faculta­ ración a través de sus espiráculos posteriores. Tam­
(Africa) irradiando las pupas con radiaciones nocidas como "mosca tsé-tsé". Mide entre 7,5 y 14 tiva. Debido a la voracidad insaciable de estas lar­ bién la infección se suele producir al ponerse en
gamma, obteniendo imagos estériles. Todas las se­ mm de longitud, es de color café grisáceo. Cuando vas localizadas en los tejidos, producen cuadros contacto la piel del hombre o de los animales con el
manas se soltaron gran número de moscas estériles está en reposo, sus alas se entrecruzan como tijeras. clínicos de intensidad variable en el hombre e in­ follaje o vegetales en donde la hembra del insecto
y los machos competían con los machos silvestres La mosca tsé-tsé es vivípara, dando nacimiento gentes pérdidas económicas por daño a los anima­ ha depositado los huevos. La larva en la dermis
por las hembras y puesto que estas se aparean una a una larva completamente desarrollada y en total les, principalmente el ganado doméstico. muda dos veces, la primera es alargad.a con la por­
sola vez en su vida, se produce gran cantidad de coloca entre ocho y veinte larvas durante su vida. Según su localización, las myiasis pueden ser ción anterior más prominente ("gusano macaco") y
huevos estériles y baja la población de moscas. Las larvas son depositadas en la tierra suelta y seca, digestivas (gástricas, intestinal o rectal), cutánea la segunda, llega a tener un aspecto de tonel
Otro método de control biológico, pero igual al y en muy corto tiempo (1 hora) se pupa. La pupa es (foruncular o migrante), oftálmica, del oído, ("tórsalo") en un plazo de unas tres semanas, al
anterior no pasa de la etapa experimental, es la café obscura, con un aspecto de barril y presenta nasofaríngea, urinaria, genital, etcétera. cabo de los cuales abandona a su hospedero y cae al
búsqueda de algún microorganismo letal para las los lóbulos posteriores prominentes. El adulto Las myiasis se clasifican en primarias u obliga­ suelo para pupar en unas seis semanas.
moscas, pero que no lo sea para el hombre y los emerge entre dos a cuatro semanas. torias, secundarias o facultativas y accidentales. La lesión de esta myiasis es de tipo tumoral,
animales. La mosca tse-tsé es de hábitos diurnos y son Además, debe distinguirse las pseudomyiasis que es furunculosa, muy dolorosa, con un orificio externo
Educación para la salud. El aspecto educativo hematófagas tanto las hembras como los machos, la presencia de larvas en las heces, producto de la bien delimitado. En el hombre ocurre preferente­
puede dar grandes dividendos en la lucha contra las alimentándose de la sangre de muchos animales, ingestión inadvertida de huevos de moscas en ali­ mente en zonas descubiertas ( extremidades, cuero
moscas. Tal vez uno de sus éxitos para sobrevivir y incluido el hombre. Algunas especies abundan en mentos o agua de bebida. cabelludo, cara, cuello, etc.), pudiendo, en ocasio­
triunfar en el entorno humano, sea su aparente las cercanías de los ríos (Glossina palpa/is, G. fi1s­ nes, ser muy grave y mortal (Figura 51-13). En los
inocuidad, puesto que no pica ni produce dolor, por cipes y G. tachinoides) y son los vectores biológicos _
Myiasis primarias u obligatorias
lo cual el hombre se-habituó a su compañía, igno­ de la enfermedad del sueño por T1ypanosoma brucei . . •.:_. ... '
animales, especialmente en el ganado, provoca per­
dida por las múltiples lesiones forunculosas (el
rante de su potencial peligro. De allí que la educa­ gambiense); en cambio, otras especies proliferan en Son provocadas por moscas cuyas larvas obliga- "tórsalo" de los animales).
ción deba tratar de crear hábitos de aversión hacia la sabana (Glossina morsitans, G. swynnertoni y G.
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462 PARASITOLOG/A MEDICA DIPTEROS: MOSQUITOS, TABA NOS l' MOSCAS 463

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Figura 51-14. Myiasis humana. (A) Larvas de Callitroga en la región occipital de un anciano con una herida
S'.fi19Ti1I descuidada, purulenta y maloliente que atrajo a las moscas para oviponer (caso del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica).
(B) Larvas de moscas en una herida quirúrgica descuidada.
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también un orificio para respirar por sus espiráculos de las cavidades (Figura 51-14). Las especies de
posteriores. Al cabo de cuatro a ocho días, abandona moscas más frecuentemente involucradas son Sar­
al hospedero y cae al suelo para pupar. cophaga haemorrhoida/is, mosca grande de abdo­
En el ganado provoca grandes pérdidas econó­ men grisáceo sin iridiscencias metálicas, prevalen­
micas y en el hombre puede producir importantes te en el hemisferio norte y en el trópico; la hembra
lesiones. El tratamiento consiste en la extracción de larvípara coloca sus larvas en carnes putrefactas o
las larvas, previamente anestesiadas con agua en cadáveres y, ocasionalmente, provoca myiasis
cloroformada al 10%. cutánea o de cavidades caracterizada por la rápida
progresión en extensión y profundidad. Otras espe­
Oestms ovis. Es una mosca grande, amarillen­ cies productoras de este tipo de myi_asis son Cal/i­
ta, de tamaño y aspecto de una abeja, cuyo desarro­ troga mace/laria, Calliplzora sp. (de color azul
llo larval ocurre en las fosas nasales y cavidades metálico), Phaenicia sericata (verde metálico) y
perinasales de ovejas y cabras, tras las cuales la Plzaenicia cuprina (bronceada metálica).
hembra recurre presurosa, puesto que al estado adulto El tratamiento, es igual al de todas las myiasis:
ya no es capaz de alimentarse. Alrededor de la nariz, extracción de las larvas, previa aplicación de solu­
la hembra larvípara deja caer las larvas que rápida­ ciones anestésicas en la superficie cutánea o en l:is
mente ascienden hacia los senos frontales donde se cavidades comprometidas.
instalan y crecen. Como habitualmente la parasita­
ción es múltiple, el malestar y sufrimiento de los Myiasis accidentales
animales es muy grande. Al cabo de 8 - 1O meses las
larvas maduras abandonan su hábitat, sea bajando Ocurre con moscas que habitualmente oviponen
hacia los orificios de las fosas nasales o son expul­ en carroñas, excrementos y materias orgánicas en
sadas enérgicamente por los estornudos. Una vez en descomposición, pero que en ocasiones y, atraídas
el suelo, se pupan. por heridas o cavidades malolientes, colocan sus
F En el hombre, se produce una myiasis conjuntiva! huevos en esos lugares. De este modo, se producen
caracterizada por una conjuntivitis aguda de inicia­ myiasis por Musca domestica, Fannia spp, Stomo.\J'S
Figura 51-13. Caso mortal por myiasis cerebral por Dermatobia lto111i11is. Un niño de cortos años consulta por aumento ción súbita y muy molesta. El accidente general­ calcitrans, Eristalis tenax, etcétera.
de volumen doloroso en el cuero cabelludo (A) que evolucionó con graves y progresivos signos meningoencefálicos que mente ocurre en regiones ganaderas, pero puede
lo llevaron a la muerte en muy corto tiempo. En la autopsia, al abrir la calota (B), se observa la lesión provocada por ocurrir también en plena ciudad. El tratamiento
la larva, la cual fue capaz de horadar el hueso (C) e introducirse en la masa encefálica (D y E). Finalmente, se aisló consiste en la extracción de la larva que se aprecia BIBLIOGRAFIA
la larva de Dermatobia (F). (Caso del Dr.. Rodolfo Céspedes, Costa Rica). fácilmente en la mucosa enrojecida.
Alías A, Donckaster R, Schenone H, Olivares M. Myiasis
El tratamiento implica una pequeña escisión para mente todos los animales de sangre caliente (screw­ Myiasis secundarias o facultativas ocular producida por larvas de Oestrus ovis. Bol Chil
extraer la larva. worm) y localizaciones cutánea y nasofaríngea en el Parasit 1960; 15:37-8.
hombre. La mosca adulta es de abdomen azul grisá­ Las moscas de la fauna cadavérica, cuyas larvas Beaver PCH, Jung RC, Cupp EW. Clinical Parasitology.
Coc/rliomyia /ro11111ivoax o Callitroga a111erica- ce�_metálico y rayas obscuras en el tórax. La hembra necesariamente se crian en carne descompuesta o 9th ed. Philadelphia: Lea & Febiger, 1994.
11a. Es la myiasis más frecuente del heníiiiferio'�or�­ deposita los hüevos en la piel y penetra a través de cadáveres, pueden, ocasionalmente, .depositar sus Boreham PFL. Sorne application ofbloodmeal identification
te, capaz de provocar lesiones cutáneas en práctica- huevos o sus larvas en heridas malolientes de ani­ in relation to the epidemiology ofvector-borne tropical
pequeñas heridas recientes, se desarrolla dejando
males o del hombre, provocando myiasis cutáneas diseases. J Trop Med Hyg 1975; 78:83-91.
..,

464 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 52


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Definición. Se denomina pediculosis a la infesta­ Son de color blanquecino, pero puede verse una
ción del hombre por Pedicu/us humamí�)y ftirosis pigmentación más oscura, casi grisácea, en el P.
a la infestación por Phthirus pubis. Ambos insectos capitin, dependiendo de la pigmentación de la piel
pertenecen a la misma familia y se tratarán en para­ y de los cabellos de la persona infestada. La cabeza
lelo. es pequeña, cuadrangular, con cortas antenas y un
par de ojos simples. El aparato bucal es complejo y
Biología está oculto en el reposo; sólo se evagina para picar,
formando un tubo cilíndrico corto y grueso, provis­
Los piojos tienen estrictos hábitos parasitarios, to de dentículos o ganchos en su extremo el cual se
son ectoparásitos permanentes de cada especie, es evierte para fijar al insecto a la piel y facilitar la
decir, realizan todo su ciclo evolutivo de huevo a introducción de los estiletes perforadores. El tórax
adulto sobre su hospedero. Son insectos hematófa­ es de tamaño reducido y da nacimiento a tres pares
gos durante todas las etapas de su vida y se carac­ de robustas patas armadas de poderosas garras
terizan por tener una metamorfosis gradual o incom­ prensiles o pinzas. El abdomen es voluminoso, ovoi­
pleta. Se clasifican en el orden Anoplura es decir de y posee placas engrosadas en los bordes de
"piojos picadores", hematófagos, exclusivamente de· cada segmento. Su extremidad caudal aparece hen­
los mamíferos y Mallophaga o "piojos mordedores dida en las hembras y puntiagudas en los machos.
del pelaje y de las plumas", que atacan a los mamí­ La hembra coloca huevos por separado, adhitjén­
feros y a las aves. Presentan una extrema especifici­ dolos con un firme soporte cementante a la raíz de
dad por ser hospederos, pues constituyen especies los cabellos, o a las fibras de la ropa en sus costuras
o variedades que sólo afectan a una determinada y pliegues. Estos "huevos o liendres", son blan_­
especie de animal, siendo incapaces de proliferar en quecinos de unos 0,8 mm de longitud y poseen un
otras. opérculo mamelonado. Tanto por su color como por
Los piojos son insectos ápteros con patas más su tamaño pueden ser fácilmente identificados a
aptas para la aprehensión que para la locomoción, ojo desnudo.
por lo que el traspaso de un huésped a otro se debe La metamorfosis de estos piojos comprende va­
efectuar por el contacto directo y ocasionalmente rias etapas. La incubación de las liendres demora
por fomites. entre 5-1 O días, dependiendo de la temperatura cor­
Dentro del orden Anoplura, la familia de mayor poral del hospedero (se detiene si baja de 23 ºC o
interés médico es la Pediculidae, a la cual pertenecen ° asciende sobre 38 ºC), al cabo de los cuales dan
los piojos del hombre y de los monos superiores. salida a una ninfa de pequeño tamaño, hematófaga
casi de inmediato, la cual en dos semanas llegará a
Pediculus humanus adulto habiendo pasado por tres mudas. La hembra
será fecundada por un macho y dos días después
Presenta dos variedades o cepas de morfolo­ inicia la postura de huevos (promedio 10 diarios),
gía muy similar, pero de localización diferente en el hasta que muere; es decir durante 30-40 días. Se
hombre: la variedad capitis o piojo de la cabellera, y calcula que el piojo de la cabeza coloca 100 huevos
la variedad corporis o vestimentis piojo de la ropa a Jo largo de su vida.
(Figuras 52-1 y 52-2). Estas dos variedades se distri­ El piojo del cuerpo deposita sus huevos y reside
buyen en localizaciones muy definidas del cuerpo. en las costuras de las vestimentas en lugar de hacer­
Se han descrito cruzamientos fértiles en un mismo lo sobre la piel del hombre. El piojo del cuerpo aban­
individuo, lo que revela que se trata de variedades dona las vestimentas sólo para obtener sangre de su
de una misma especie. hospedero. Las liendres presentes en las ropas son
Morfológicamente son· insectos deprimidos en viables hasta por un mes.
466 PARAS!TOLOG!A MEDICA PIOJOS Y PULGAS 467

TABLA52-l
EL PEDICULUS VESTIMENTIS COMO VECTOR BIOLOGICO DE ENFERMEDADES

Enfermedad Agente etiológico Si11tomatología prÍllcipal Mecanismos de transmisión

Tifus exantemático Rikellsia prowazeld Síndrome febril intenso Contaminación con


epidémico compromiso del estado deyecciones del insecto
general, exantema
morbiliforme

Fiebres recurrentes Borrelia recurren/is Síndrome febril Contaminación por


recurrente cada 4-6 días aplastamiento de los piojos

Fiebre de las trincheras Rikellsia quintana Síndrome febril Contaminación con


recurrente cada 5 días deyecciones de piojos
y erupción morbilifonne

d
casi transparente; se sitúa adherido de plano a la sexual y con menor frecuencia por contacto con
superficie de la piel, asido con firmeza a la raíz del ropa personal o de cama. Los grupos de riesgo están
pelo (Figura 52-1). constituidos por adultos que mantienen conductas
En el transcurso de la vida, la hembra pone unos de promiscuidad sexual y mantienen contacto con
50 huevos, de color grisáceo con un opérculo coro­ reservorio humano infestado.
nado por altos mamelones de tamaño visible a sim­
ple vista (0,6-0,7 mm), pegándolos a los pelos de la Patología
región infestada. Luego de 6-8 días de inoculación,
de cada huevo surge una ninfa hematófaga, la que Los piojos tienen importancia médica como ecto­
después de tres mudas, se convierte en adulto en un parásitos y en algunos casos, como vectores bioló­
lapso de dos semanas. El adulto vive aproximada­ gicos. La acción parasitaria misma se caracteriza
mente un mes. por lesiones directas provocadas por las picaduras.
El efecto patogénico esencial se debe más a la irri­
Epidemiología tación cutánea, probablemente causada por la saliva
que inoculan al picar, que a la expoliación hemato­
3 Se han observado infestaciones por piojos en fágica.
casi todas las regiones habitadas del mundo. Sus Producto de la picadura se observa la aparición
tasas de infestación varían de acuerdo al clima de ronchas y en casos masivos dennatitis micro y
estacional, hábitos y costumbres. Aún cuando se macronodular, intensamente pruriginosa. Secunda­
reconoce su endemia en determinadas zonas, a lo rio al gratage, se pueden observar lesiones traumáti­
largo de la historia destaca la aparición de epide­ cas, escoriaciones o infecciones secundarias por los
mias en épocas de guerras, hacinamiento o falta de gérmenes piógenos habituales de la pie!, que llevan
Figura 52-1. Aspectos morfológicos de los piojos del ser humano. (1) Pediculus h11111a1111s macho y hembra; nótese la higiene personal. a una piodermitis o cuando se sobreinfectan, a im­
diferencia en el ápice del abdomen; (2) Phthirus pubis adulto; (3) y (4) Huevos de P. /111111a1111s y de P. pubis, Cada tipo de piojo infesta preferencialmente de­ pétigo.
respectivamente. tenninados grupos de personas. Por ejemplo, el El Pediculus humanus var vestimentis es el único
Pediculus lmmanus var capitis se observa con ma­ piojo que se ha demostrado que en forma natural
Durante el estado adulto el piojo tiene poca ca­ Phthirus pubis yor frecuencia en niños que en adultos, y más en puede ser un vector biológico; las enfermedades que
pacidad de ayuno y requiere estar alimentándose mujeres que en hombres, se ha visto un aumento de puede transmitir se resumen en la Tabla 52-1.
casi de continuo, sobre todo en la noche o cuando Se localiza en la región pilosa del pubis y en la prevalencia de la Pediculus humanus var capitis
el individuo está quieto. Los piojos son muy estacio­ a nivel escolar. El P. humanus var vestimentis pre­ Sintomatología
área genital abdominal circunvecina. Más raro es
narios en sus localizaciones y permanecen muchas domina en indigentes, vagabundos de ambos sexos
encontrarlo en axilas; bigote, barba, pestañas y ce­
horas y hasta días completos adheridos al mismo jas. Mide 1,0 a 1,5 mm, es más pequeño que el P. con mala higiene personal, que viven en condicio­ El Pediculus humanus var capitis adulto tiene
/
. sitio dé la picadura. Las variaciones de temperatura nes de gran miseria, los que rara vez logran asearse su hábitat en la cabellera y sus liendres se ubican
hwnanus. Es tan ancho como largo y se caracteriza
corporal del hospy,dero les resultan inhóspi_\as y t}�l!;u por tener un fue,i;!e, .desarrollo de las patas provistas o cambiar su ropa interior y además, conservan al preferentemente en las regiones tempora!es, occipital
den a abandonar-al sujeto parasitado, favoreciéndo­ dormir las mismas vestimentas del día. y retroaricular del cuero cabelludo; sm embargo,
de grandes garras que le asemejan a un pequeño pueden afectar todo el cuero cabelludo, así como la
se de este modo, su diseminación a otras personas. El Phthirus pubis es más corriún entre los 15 y
cangrejo. Es aplanado dorsoventralmente, de color zona de la barba.
40 años de edad, ya que su forma de transmisión es
, .

-�- ��..�

468 PARAS!TOLOGIA MEDICA
PIOJOS l' PULGAS 469

El P. humanus var vestimentis tiene su hábitat pediculosis corporis, el examen debe reforzarse en
en las costuras y pliegues de la ropa. Esporádica­ los pliegues o costuras de la ropa.
mente se le puede encontrar en la pilosidad. corpo­ Es adecuado examinar las zonas con buena luz
ral. Los pacientes refieren prurito y desarrollan pe­ con la ayuda de una lupa manual sobre todo en ei
queñas máculas eritematosas, pápulas y excoria­ caso del Phthirus pubis que por su tamaño y color
ciones que se localizan principalmente en el tronco puede pasar desapercibido. En este último caso, es
en las zonas dorsal e interescapular, axilar, en plie- recomendable cortar algunos pelos y examinarlos al
gues subrnamarios y en la cintura. microscopio.
En las infestaciones masivas y antiguas no tra­ Los antecedentes epidemiológicos como contac­
tadas, por la continua irritación y gratage, la piel tos positivos con personas infestadas en colegios,
aumenta su grosor y adquiere pigmentación bron­ jardines, campamentos juveniles u otros y la exis­
ceada con rastros hemorrágicos. A esta entidad se le tencia de miembros de la familia con síntomas simi­
conoce corno "melanoderrnia pediculósica" o "en­ lares, hace sospechar el diagnóstico.
fermedad de los vagabundos". Puede observarse
infección bacteriana secundaria, con reacción linfá­ Tratamiento y control
tica regional.
El Phthirus pubis se localiza en la pilosidad De gran importancia es notificar al paciente y a
perigenital y en las regiones próximas. Con menor su grupo familiar los mecanismos de transmisión
frecuencia se encuentra en las axilas, barba, bigote, de esta patología. Para una adecuada vigilancia epi­
pestañas y cejas, y en forma µmy excepcional en el demiológica, se sugiere la notificación del caso a los
límite coronario de la cabellera. Sus picaduras pro­ posibles contactos para su tratamiento simultáneo,
vocan reacción dermítica y pruriginosa semejante a delimitando así su transmisión o reinfección.
la producida por Pediculus lmmanus, pueden obser­ Antes de realizar el tratamiento contra el pará­
varse máculas o pápulas eritematosas con excoria­ sito, debe evaluarse la necesidad de dar tratamiento
ciones o infección secundaria y si aparecen, son sintomático antipruriginoso con antihistamínicos y
menos notables que en la pediculosis de la cabeza y terapia con antil:iióticos sistémicos, si hay eviden­
del cuerpo. Se pueden observar liendres y en ocasio­ cias clínicas de infección bacteriana secundaria, que
nes, a los piojos pubianos adultos fijados a la base se realizará en fonna simultánea al tratamiento
de los pelos. antiparasitario.
Se describen pequeñas máculas de color gris El hexacloruro de benceno es una mezcla de 8
azulado que miden 1-2 mm de diámetro sobre el isómeros de los cuales el isómero gamma recibe el

·J·, i
tronco, los muslos y las partes superiores de los
brazos. Se piensa que estas lesiones, conocidas como
maculae ceruleae, son provocadas por un anticoa­
nombre de Lindano. El Lindano es un insecticida
utilizado ampliamente en el control de artrópodos
en la agricultura. Se absorve a través de la quitina del
··..j gulante que inyecta en la piel el piojo al picar. En exoesqueleto de estos parásitos. En su aplicación al
infestaciones intensas y de antiguas se observa ser humano se ha demostrado, en estudios experi­
·',:,•.;¡
":,¡
¡, . hiperqueratosis y melanodermias de las zonas afec­ mentales, que puede absorberse por la piel, entrar en
! tadas. El prurito es muy marcado y constituye el la sangre y recobrarse aproximadamente el 10% de
¡ síntoma fundamental. Eventualmente se puede lo­ la orina. Se ha recuperado en la leche materna de
calizar en las cejas y pestañas; en esta última, pro­ mujeres expuestas, pero no ha sido causal de restric­
Figura 52-2. Microscopia de barrido de ;ediculus capitis. A) Vista dorsal. B) Vista lateral de un ejemplar adherido duce una conjuntivitis folicular tóxica en niños y ción de lactancia materna dado que no han sobrepa­
_ una conjuntivitis papilar irritante en los adultos, sado en 10 veces lós límites recomendados para la
a u� cabello. CJ Acercamiento lateral: notese la antena y un espiráculo
- torácico. D) Vista frontal (Sr. José Morillas,
Chile). secundaria a alguna sustancia irritante (deposicio­ lecha de vaca. El Lindano se detecta en nuestro
nes). El margen del párpado por lo general está medio ambiente y se acumula en el tejido adiposo y
enrojecido y el enfermo se queja de prurito intenso. en el cerebro. Está presente en aceites y comestibles
e incluso, se ha identificado en el tejido adiposo de
El principal síntoma del paciente infestado es el Por hipersensibilidad, se puede desarrollar una Diagnóstico la mayoría de las poblaciones humanas estudiadas.
prurito. Secundario al gratage, pueden desarrollar- erupc!ón morbilifonne pruriginosa y simétrica, en No se han demostrado efectos teratogénicos huma­
se excoriaciones e infecciones bacterianas secunda- especial en la parte superior del tronco y de los El diagnóstico se realiza al encontrar cualquier nos ni aumento de abortos espontáneos. Se ha comu­
rías que se manifiestan por secreción y formación brazos. En infestaciones masivas, los cabellos apa- estado evolutivo del parásito. Se debe realizar un nicado la aparición de efectos colaterales tóxicos del
de costras del cuero cabelludo, así como de ade- rece� salpicados por huevos y parásitos. En algunas examen físico riguroso en las zonas de localización Lindano, como convulsiones e incluso la muerte en
nopatías cervicales Y occipitales sensibles a la pal- ocasiones se produce una verdadera coraza O caso más frecuente, de acuerdo a las características clí­ relación a ingesta oral o a aplicaciones reiteradas
. pación. Es frecuente qt¡e el. t)lQt.ivp. de consulta .sea , . piloso, duro y maloliente (denominada plica caló­ nicas manifestadas por el paciente. con concentraciones inadecuadas. La toxicidad no
··una dermatitis del cuello o de los pabellones auri- · 11ica), bajo la cual se pueden encontrar cientos de En, el caso: d_1:_-la pediculosis de Ja cabeza, el es un problema cuando se trata por cortos períodos,
culares. piojos. examen debeccimenzar en la región pilosa retro­ donde se produce una mínima absorción sistémica.
auricular y de allí a todo el cuero cabelludo. En la Para el tratamiento de la pediculosis, el Lindano se
4.70 PARASITOLOG!A MEDICA

utiliza en solución al l % para P. capitis y Phthirus PULGAS


T PIOJOS Y PULGAS

Peine prenota!

pubis y en polvo al l % para el P. vestimentis.


Como fármacos alternativos a la droga conven­ Las pulgas son insectos del orden Siphonaptera
cional Lindano (Lindano®, Kwell®) se encuentran constituido por unas dos mil especies, la mayoría de
disponibles en presentaciones de loción o shampoo, las cuales son ectoparásitos de mamíferos, aunque
Crotamitón (Eurax®, Clamox®), Decametrina (Api­ aproximadamente unas cien lo son de las aves. Mi­
les®), Piretrina y Butóxido de piperonilo (Quiloso®), den entre 0,5 y 4 mm de longitud, y su cuerpo,
Malatión al 0,5%, Permetrina tópica al 1%, Delta­ fuertemente esclerotizado por quitina, es de distin­
metina + Butóxido de piperomilo (Launol®), fárma­ tos tonos de café. Son angostas y aplanadas
cos que han dado buenos resultados. transversalmente y carecen de alas. Presentan una
El fármaco debe ser aplicado en forma de loción cabeza firmemente unida al tórax, en la que destacan
(no de shampoo) sobre la zona parasitada, pero no los ctenidios, peines espinosos adaptados para afe­
debe usarse sobre superficies calientes ni sobre piel rrarse al pelaje o al plumaje de sus hospederos. Su
con lesiones por el peligro de aumentar su absor­ aparato bucal está adaptado para picar y se alimenta
ción. Si se utiliza Lindano, se debe aplicar por seis, exclusivamente de sangre; posee ojos simples y
doce o veinticuatro horas y luego retirarlo para ser antenas cortas. El abdomen es grande en relación al
nuevamente usado una semana después debido a tamaño del insecto y contiene-los órganos internos
que no es ovicida. y el aparato reproductor que en las hembras es fácil
Para eliminar las liendres, se puede aplicar una de reconocer por la presencia de una formación
solución de partes iguales de vinagre y agua y luego sacular, la espemateca que tiene el aspecto de una
peinar el cabello con un peine de dientes finos, su­ calabaza. Sus patas son poderosas y el tercer par es
mergido previamente en vinagre. Los peines y cepi­ muy desarrollado y adaptado para saltar: la pulga de
llos deben lavarse en un pediculicida durante 5 mi­ la rata salta más de cien veces el largo de su cuerpo
nutos. Los shampoos con insecticidas son trata­ y las pulgas del perro y gato pueden brincar hasta Figura 52-3. Morfología general de una pulga.
mientos coadyuvantes. 33 cm de altura, lo que sería realmente sideral si el
Los piojos del cuerpo pueden erradicarse descar­ hombre tuviera esta cualidad. El tubo digestivo de
tando las vestimentas cuando es factible o lavándo­ las pulgas presenta en su tercio anterior, el
las en el ciclo caliente del lavarropas y planchando proventrículo, una formación de peines quitinosos
luego, con cuidado, las costuras o bien, aplicando radiados y de dirección distal que tiene la función de
insecticidas en polvo, aunque no es el tratamiento de y el verano. Las bajas temperaturas pueden exten­ irritans, la pulga del hombre; Ctenocepha/ides ca­
filtrar la sangre ingerida.
elección por su baja eficacia. La existencia de hospe­ der el periodo larval a más de doscientos días y el nis y C. fe/is, pulgas de perros y gatos, pero que
Presentan un ciclo de desarrollo holometabólico
derías donde se lava la ropa, ha ayudado a disminuir estado pupal quiescente, hasta alrededor de un año. atacan por igual al hombre, otros mamíferos y ac­
o metamorfosis completa con fases de huevo, larva,
la incidencia de esta patología. La liberación instantánea de la pulga adulta desde cidenta lmente aves; Xenopsyl/a cheopis, pulga de
pupa e irnago. Los huevos son relativamente gran­
Para el tratamiento del Phthirus pubis se aplica el capullo pupa!, se produce por cambios de tempe­ la rata especialmente de Rattus spp. que tiene gran
des (0,5 mm), blanquecinos y la hembra los deposita
el insecticida en las zonas afectadas, excepto los ratura o bien por cambios bruscos de presión atmos­ importancia en salud pública debido a que es el
por grupos, hasta completar entre 200 y 400 en la
párpados. La infestación de los párpados se trata férica, como suele ocurrir al abrir las puertas de wctor más importante de la peste bubónica y del
superficie de su hospedero y de allí caen al suelo,
con extracción manual de adultos y liendres previa casas de veraneo cerradas durante el invierno y tifus murino, y Tunga penetrans, productora de la
contaminando alfombras, tapices o bien son coloca­
aplicación de vaselina. donde los moradores son atacados vorazmente por tungosis.
dos por la hembra en grietas, debajo de muebles y
Siempre.debe tratarse simultáneamente a la pare­ las pulgas recién nacidas. En relación con el hombre, las pulgas pueden
cerca de sitios en que duermen los gatos y los pe­
ja, puesto que la ftirosis se considera una enferme­ En general, las pulgas adultas permanecen gran actu ar como: productora per se de enfermedades,
rros. Bajo condiciones favorables de temperatura y
dad de transmisión sexual. parte de su vida en el medio exterior y fuera de sus vectores biológicos y hospederos intermediarios de
humedad, la larva emerge al cabo de una a tres se­
hospederos. No tienen una especificidad muy mar­ algunas cestodosis.
manas y son muy diferentes en su forma y hábitos
Prevención que los adultos: son blancas, vermiformes, cubiertas cada por sus hospederos, aunque tengan preferencia
por algunos de ellos. De este modo, en su afán de Productores per se de enfermedad
de gruesas cerdas, no son parásitos, son muy ágiles
La transmisión de la pediculosis puede dismi- y con su aparato masticador, se alimentan de restos conseguir sangre, atacan a diversas especies de
orgánicos, especialmente de deyecciones de las animales. Y los nombres comunes (pulgas de la Pulicosis. Son las lesiones provocadas por la
nuirse al mínimo con el tratamiento adecuado del
pulgas adultas. La larva requiere entre 9 y 15 días rata, del hombre, etc.), se refieren sólo al hospedero picadura de pulgas. Se caracterizan por pápulas
caso y simultáneamente de sus contactos con aseo eritematosas"coh un punto petequial central. Produ­
riguroso del cuero cabelludo y del cuerpo, cambio de para completar sus tres mudas y puparse. La pupa preferido, pero no exclusivo.
ropa al dormir y con educación sexual para revertir ce prurito ·y'.ie�i'émes alérgicas que, en ocasiones,
primariamente es desnuda, conserva algún grado de
conductas promiscuas. movirnien_to y se va cubriendo de polvo y pelusas Importancia médica obliga al usó�de antihistamínicos por .vía· g!!neral.
Programas intersectoriales que coordinen accio- formándose un saco pupal, donde permanece Evolucionan con er progresivo empalidécü'nien( o
nes entre los Colegios, Consultorios y Municipalida- quiescente por plazos variables de días o meses. Las especies de pulgas más frecuentemente in­ de la zona eritropapulosa, quedando la peteqma
volucradas con el hombre en la producción de central, lo que debe considerarse para el diagnó� ti­
des, y generen programas orientados a una adecua- El ciclo evolutivo es favorecido por las altas tem-
molestias por su picadura, ser productoras de enfer­ co diferencial con otras lesiones eruptivas de la piel.
da vigilancia epid�111iológica, permiten disminuir.tas ...,1. peraturas y humedad elevada. Como consecuencia,
sas de infestación a mediano plazo y disminuyen los en las zonas geográficas de clima templado, la medad, actuar como vectores biológicos y como
hospederos intermediarios son, entre otras, Pu/ex Tungosis. Conocida con los nombres populares
costos sociales y personales. pululación de pulgas aumenta durante la primavera

,i
,1
J72 PARASITOLOGIA MEDICA PIOJOS Y PULGAS 473

Xenopsylla cheopis Nosopsyl/us fasciatus Ctenocephalides canis Huevos


Po/ex irritans

1
1
,\
¡i '
1,
,,1

!mago

f,o

Figura 52-4. Algunas características diferenciales entre especies de pulgas. Arriba: detalles de la cabeza y del tórax.
Abajo: aspecto de la espermateca de las hembras.

de nigua o bicho do pé, es la infestación de la piel peores desastres de la humanidad, como ocurrió con
del hombre y otros animales por Tunga penetrans, la pandemia del siglo XIV que cobrara 25 millones Pupa
pulga prevalente en zonas cálidas de América Cen­ de muertos, es decir, la cuarta parte de la población
tral y Sudamérica. de Europa. Figura 52-5. Ciclo de desarrollo (metamorfosis completa) de las pulgas.
La hembra vive en el polvo o la arena de zonas La pulga adquiere Y. pestis al ingerir sangre
rurales y penetra la piel del hombre, preferentemen­ infectada y en el intestino el microorganismo llega
te alrededor de la base de las uñas o entre los dedos a multiplicarse tan exitosamente que llega· a blo­ que también ataca a ratas domésticas y otros peque­ de este modo en el hemocele se desarrollan los
del pie y de la mano. Cuando penetra la piel, apenas quear el proventriculo. Cuando la pulga pica a otro ños mamíferos, a la pulga y eventualmente al hom­ cisticercoides, lo cuales persisten hasta que el insec­
mide I mm de longitud, pero gradualmente, una hospedero, la sangre no logra franquear la obstruc­ bre. Se presenta en zonas geográficas con clima to alcance el estado adulto. Las especies de pulgas
vez fecundada, se expande hasta alcanzar el tamaño ción intestinal, se contamina con la bacteria y es cálido de todo el mundo. Su reservorio principal es más frecuentemente involucradas son Ctenocep/zw­
de un guisante. Allí se alimenta de sangre y coloca regurgitada hacia la herida de la picadura, propa­ Rattus norvegicus que sufre una enfermedad leve. lides canis y C. Je/is, Pu/ex irritans y Xenopsylla
los huevos que caen al suelo a través de una abertura gando así la infección. Xenopsylla clzeopis es un El tifus murino es transmitido de rata a rata por cheopis. El ciclo se completa cuando los respectivos
en el punto en que penetró la pulga y que siempre buen vector de la infección, debido a que su intes­ diversos géneros de pulgas, principalmente Xenop­ hospederos vertebrados ingieren pulgas infectadas.
está abierta. Los machos no penetran la piel y se las tino se bloquea fácilmente, es hematófaga de roedo­ sylla c/zeopis y Nosopsyllus fasciatus. Las rickett­ Igualmente, el hombre se transforma en hospedero
arreglan para copular con la hembra por esa aber­ res y del hombre, y pulula abundantemente alrede­ sias se multiplican en las células del intestino me­ accidental, cuando inadvertidamente ingiere dichas
tura, cuando ésta ya ha alcanzado su hábitat. dor del hombre. En esta infección existe una eleva­ dio de la pulga, luego estas células repletas de mi­ pulgas.
La tungosis provoca intenso prurito, dolor, in­ da mortalidad de pulgas, de ratas y del hombre. En croorganismos se rompen dejándolas en libertad y
flamación y, frecuentemente, hay infección secun­ la naturaleza, la peste es una infección enzoótica salen al exterior con las deyecciones del insecto, el Control de pulgas
daria. El tratamiento consiste en la remoción qui­ entre los roedores silvestres con brotes epizoóticos cuai' no muere por la infección. En el hombre pro­
rúrgica de cada hembra con un bisturí o un estilete, que pueden extenderse a roedores domésticos, espe­ voca una enfermedad febril poco intensa, con calo­ Tomando en consideración las particularidades

1:
bajo condiciones de esterilización cuidadosa y el cialmente Rattus rattus y Rattus norvegicus, y de fríos, cefalea, dolores osteomusculares y rash cutá­ del ciclo evolutivo y el comportamiento de la pulga
eventual uso de antibióticos. allí fácilmente se producen los. brotes epidémicos neo, de unas dos semanas de duración. adulta, su control debe centrarse primariamente en
entre los hombres. el aseo y mantención de la vivienda y como medidas
Vectores biológicos La peste puede adoptar diversas formas clínicas Las pulgas como hospederos intermediarios complementarias, el empleo de insecticidas en las
(septicémica, bubónica y neumónica), todas extre­ de algunas cestodosis dependencias de la casa y en los animales domésti­
Las pulgas son eficientes vecio���:
· · · de la peste madamente graves, cuyo estudio detallado escapa a cos, y la lucha contra ratas y ratones.
bubónica y del tifus murino. los objetivos de este libro. Las eficientes medidas Las pulgas son hospederos intermediarios del El mejor procedimiento de control de pulgas es
sanitarias, centrada sobre todo en el control de la Dipylidi1m1 caninun, cestodo común de perros y el aseo periódico de la vivienda y sus dependencias,
Peste bubónica. Esencialmente es una enfer­ población de ratas, ha alejado los brotes epidémicos gatos, de Hymenolepis diminuta, cestodo de la rata dado que los huevos, larvas y pupas se desarrollan
medad de roedores y es contraída por el hombre a de esta infección. y de Hymenolepis nana, cestodo del hombre y de la en el medio externo y los estados adultos se guare­
través de la pulga, particu)aT11_1�nte por XenoP.,syJ!g , rata. Las pul_ga� adquieren la inf�c,9Jg11_�! estado de cen en esos mismos sitios. Se debe procurar el aseo
c/zeopis. Esta enfermedad.es .producida por hi'biic-· Tifus murino. Es producida por Rickettsia typlzi, larvas, cuando.ingieren los huevos de estós cestodos mecánico para aspirar todo vestigio de polvo o tié­
teria Yersinia pes/is y ha sido la causante de los morfológicamente indistinguible de R. prowaseki, contenidos en las heces del hospedero vertebrado; rra del piso y alfombras, procurando mover mue-
'1''

474 PARASITOLOGIA MEDICA PIOJOS Y PULGAS 475

gía demuestra imágenes intersticiales y en el he­ con gases de cianuro o de monóxido de carbono y
mo grama se encuentra trombocitopenia, con pesticidas organofosforados, y en la casa y sus
leucocitosis neutrofilica y reacción linfocitaria. Las alrededores con diversos tóxicos, especialmente los
hemorragias aparecen entre el tercer y sexto día, derivados del dicurnarol que provocan una acción
seguidas de hipotensión arterial y shock. Los tras­ hemorragípara en los animales que los consumen.
tornos renales, aunque infrecuentes, pueden evolu­
cionar hacia una insuficiencia renal aguda. En este
período se presentan las defunciones. Los hallaz­ BIBLIOGRAFIA
gos histopatológicos corresponden a una neumonitis
intersticial con infiltrado de células mononucleares, Aldev AK. Epidemiology and incidence of plague in the
edema y membrana hialina focal; pero puede haber world, 1958- 1979. Bull WHO 1982; 60: 165-9.
daño alveolar difuso y desorganización severa del Beaver PCH, Jung RC, Cupp EW. Clinical Parasitology,
espacio áereo. 9th ed. Philadelphia: Lea and Febriger, 1984.
Los mecanismos de transmisión del Hantavirus CITUC (Centro de Información Toxicológica, Universi­
son ingerir o inhalar fluidos contaminados con excre­ dad Católica de Chile) Micromedex !ne.Vol 88. 1974-
A
tas, orina y saliva de ratones, tomar ratones con las 1996 Poinndex ® Toxicologic Management Topic, Lin­
Figura 52-6. Tungosis. Aspecto de las lesiones de las extremidades. (Cortesía del Dr. Rodolfo Céspedes, Costa Rica). manos descubiertas o ser mordido por ellos. Los dan.
grupos de riesgo son habitantes de zonas rurales, Hogan D y cols. Diagnosis and treatrnent af chilhood
excursionistas que instalan sus campamentos en scabies and pediculosis. Pediatr Clin North Am 1991;
bles, camas, sillones y otros enseres que permane­ que es alrededor de un año, tienen entre 4 y 8 lugares carentes de condiciones mínimas de control 38: 941-57.
cen largo tiempo en uil mismo lugar, sitios en que camadas con 6 a 12 crías cada una. Son omnívoras sanitario, los propietarios de casas y cabañas ubica­ Hunter GW, Swartzwelder JC, Clyde DF. Tropical Medi­
reposan perros y gatos con el lavado y cambio fre­ ingiriendo alimentos vegetales y animales con gran das en zonas rurales que mantienen sus propiedades cine. 5th ed. Philadelphia: WB Saunders Co, 1976.
, cuente de sus cobijas, etc. Especial cuidado debe voracidad y al mismo tiempo, los contamina e in­ cerradas durante largos períodos, etc. El virus es Marcus D y cols. Incidencia de pesticidas organoclorados
l!.: tenerse en el aseo de galpones, bodegas o casas de utiliza. Además, practican el canibalismo lo que muy sensible a los cambios del ambiente y desapa­ en leche materna de diferentes estratos socioeconómi­
,

veraneo que permanecen cerrados por tiempo pro­ tiene especial trascendencia en la mantención rece al contacto con cloro o desinfectante. El tiempo cos de la Región Metropolitana. Rev Chil Nutr 1991;
1,
¡: longado y donde pueden permanecer quiescentes enzoótica de algunas infecciones (triquinosis). que el virus sobrevive en el ambiente es aún desco­ 19:
pupas que bruscamente, despertadas por los cam­ Los múridos que nos interesan son la rata gris nocido. Mella y cols. Experiencia en el tratamiento de sarna y
bios de presión que se producen con sólo abrir o rata noruega (Rattus 11orvegicus) de gran tamaño El control de múridos se efectúa mediante accio­ pediculosis a nivel comunal, en el servicio de Salud
i: puertas y ventanas, dan origen a las pulgas adultas. (18-24 cm de longitud, sin considerar la cola) y nes preventivas que limiten su pululación cerca del Metropolitano Suroriente, 1984-1986. Jornadas de
El empleo de insecticidas de acción residual peso (hasta 500 g), de cola corta y orejas relativa­ hombre y su eventual penetración a la vivienda, SaludPública 1987.
prolongada es una importante medida complemen­ mente pequeñas de alrededor de un tercio del tama­ . bodegas y almacenes, como son el arreglo de cimien­ O Done! John. Arthropods and Human sido. New York.
taria y se recomienda su aplicación en los mismos ño de la cabeza, abunda en los puertos y en los tos, paredes y techos de la casa, una adecuada eli­ USA: SpringerVerlag, 1984.
1!:,
,1;

í
sitios en que previamente se ha efectuado un meti­ cursos de ·agua, y construye sus madrigueras en el minación de basuras, el correcto resguardo de ali­ Soulsby EJL. Helminthos, Arthropods and Protozoa of
culoso aseo. Su empleo directo sobre perros y ga­ suelo, habitualmente en relación con los cimientos mentos en recipientes y contenedores herméticos, y Domesticated animals. 7th ed. London: Bailliere
,,

tos es discutible por las características del ciclo de casas y edificios. La rata negra (Rattus rattus) es
_J el uso de trampas de resorte o jaulas-trampas. El Lyndell, 1982.
1

11·
j evolutivo de las pulgas, además de sus eventual de menor tamaño y pesa hasta 300 g, se caracteriza TurrowV. Phthiriasis palpebrarum. An unusual course of
li¡·,_
\11,'1

i¡'
acción tóxica. por ser muy ágil y trepadora, y se aloja en
entretechos, áticos, muebles y en cercas, árboles y
arbustos cercanos a la casa; tiene la cola más larga
exterminio con rodenticidas puede hacerse en bode­
gas y otras dependencias mediante fumigaciones blephariris. Arch Pediatr Adolesc 1995; 149.

,¡!
que el cuerpo y sus orejas son de longitud superior
Control de ratas y ratones

El control de pulgas está estrechamente relacio­


'I 1i
a la mitad del tamaño de la cabeza. Y por fin, el
nado con el control de ratas y ratones, por el íntimo ratón casero o laucha (Mus musculus) es pequeño,
contacto que existe entre ellos. Los múridos pesa unos JO a 20 g, de cuerpo delgado y de' cola
1; sinantrópicos constituyen un enorme contingente, más larga que la longitud del cuerpo.
muchas veces sigiloso e invisible, que convive con Entre los roedores silvestres, el O/igoryzomys
el hombre, invadiendo su hogar y su entorno en /o11gicaudata, un ratón de campo de diminutas di­
i
procura de madrigueras y de alimento, provocan­ mensiones (cuerpo y cabeza de 9 cm y una larga cola
do; por una parte, ingentes pérdidas económicas y de 12 cm), es el reservorio principal del virus Hanta.
por otra, representan un grave peligro para la salud El cuadro clínico de esta zoonosis se caracteriza por
sea por su acción agresora per se, por su capacidad la aparición brusca, luego de un período de
de transmitir infecciones y ser un importante reser­ incubación de hasta 56 días, de fiebre, gran postra­
vorio de pulgas. Tienen una amplia distribución en ción, congestión conjuntiva!, cefalea, mialgias, al­
la ciudad y en el campo, en las cercanías de cauces,
ríos y alcantarillado, invaden los cimientos y los
gunas manifestaciones catarrales respiratorias y al
cabo de tres a cinco días, se desencadena distrés
l.
techos de la vivienda. Presentan un gran potencial respiratorio acompañado de signología pulmonar
biótico, puesto que en el transcurso de sus vidas, compatible con una neumopatia aguda. La radiolo-
TRJATOMAS, CHINCHES Y CUCARACHAS
Capítulo 53 PARASJTOLOGJA MEDICA

TRIATOMAS, CHINCHES Y CUCARACHAS ¡

ANTONIO ATIAS ''i


1
i \

l
TRIATOMAS fagos, en los cuales generalrn\:nte sólo las hembras
son hematófagas, en este caso se duplica el poten­
Entre los hemípteros de la familia Reduvidae, tie­ cial de acción de los triatomídeos corno vectores
ne especial interés médico la subfamilia Triatorninae biológicos del Trypanosoma cruzi. Pareciera que la
por su rol en la transmisión de la enfermedad de proximidad de un vertebrado es más importante que
Chagas. Las más de cien especies de triatornideos se la especie a la cual pertenece. El termotropisrno es Triatoma Panstrongylus Rhodnius
distribuyen casi exclusivamente en América, entre el estímulo más imperioso para que los triatomídeos
los paralelos 43º de latitud norte y 40° latitud sur, se procuren su alimentación. No es infrecuente que Figura 53-2. Posición cie las antenas con que se diferencian los principales géneros de Triatominae.
pululando en zonas selváticas y húmedas o en zonas el contenido intestinal de los triatomideos revele
áridas y secas, alimentándose de la sangre de anima­ que la sangre ingerida sea de procedencia mixta,
les silvestres, y en ocasiones, afectando pobl?cio­ perteneciente a varías especies de vertebrados. Así ambiente silvestre, pululando troncos de árboles y En extensas áreas de América, los triatomídeos
nes suburbanas y rurales, en el domicilio y peri­ corno son capaces de ingerir gran cantidad de san­ plantas, especialmente palmeras, cercas de piedras, reciben variados nombres populares, siendo los más
domicilio del hombre, ejerciendo su acción hemató­ gre, cuyo volumen suele ser mayor que la del peso bajo hojas secas o en el suelo, cercanas a las madri­ frecuentes los de "vinchuca" en Chile, Argentina,
faga sobre éste y los rnarniferos domésticos que lo del insecto, también puede soportar ayunos por gueras de marsupiales, roedores, murciélagos, pri­ Paraguay y Uruguay; "barbeiros" en Brasil; "chiri­
rodean. largos períodos. mates o nidos de aves, sitios en los que encuentra rnachas" en Perú, y en otras regiones de los conoce
Los triatornas adultos son de diverso tamaño, Los triatornídeos, incluso los actuales de hábitos su fuente de alimentación. Sin embargo, varias espe­ como "chipos", "chinches picudos", "kissing-bugs"
habitualmente entre 2-3 cm de longitud y tienen dis­ domiciliarios, han pertenecido primitivamente al cies, generalmente del estado adulto, invaden la: vi­ y muchos más. Algunas especies se han adaptado
tintos tonos de café, según las especies (Figura 53-1 vienda del hombre, tanto el domicilio mismo como el a la vivienda humana, presentan pocos biotopos
y Lámina 22). La cabeza es cónica, con antenas lar­ peridornicilio representado por gallineros, conejeras, silvestres y cornúrnnente su dispersión es pasiva
gas y delgadas (Figura 53-2); ojos principales com­ cuyeras, corrales de cabras y pircas o cercas de relacionada con la actividad del hombre, corno son
puestos y prominentes, y con dos ocelos posterio­ piedras que circundan la casa (Figura 53-4). En las Triatoma infestans y Rlzodnius proli.xus; otras están
res; con una trompa o proboscide rígida que perma­ viviendas de las zonas rurales o suburbanas (ran­ todavía en proceso de adaptación a las viviendas,
nece doblada baja la cabeza cuando está en reposo, chos chagásicos) los triatomídeos prefieren los luga­ pero mantienen biotopos silvestres, corno son Pans-.
para ser proyectada hacia adelante cuando va a picar res quietos, obscuros y cercanos a su fuente de trongylus megistus, Triatoma dimidia/a, T. sordida,'
(Figura 53-3). Del tórax nacen las patas relativamente alimentación sanguínea, corno son las requebra­ T. maculata y T. brasiliensis.
largas y delgadas, y los dos pares de alas: un par de jaduras de las paredes de barro, muebles, detrás de
herniélitros que se entrecruzan sobre el abdomen, los cuadros colgados en las paredes, colchones de Importancia médica
cubriendo el segundo par de alas de tipo membra­ camas, o bien en los techos de paja desde donde se
noso. El abdomen es grande, ensanchado; aplanado dejan caer ("vinchuca") para picar. Allí viven y rea­ Lesiones por picadura. Corno generalmente ocu­
en el ayuno, se dilata enormemente corno un globo, lizan todo su ciclo evolutivo (Figura 53-5). Durante rren en la noche, las picaduras de los triatornídeos
cuando el insecto ha ingerido sangre. El borde lateral el día, permanecen inactivos y en la noche salen de pueden pasar desapercibidas por el hombre que está
del abdomen, llamado "conexivo" presenta zonas de sus escondrijos para picar a sus víctimas durante el en reposo, debido a que son poco dolorosas. Espe­
diversos colores, característico de cada especie, que \ sueño. cialmente en los niños, se producen reacciones cu­
sirve de base para la taxonomía del género de tria­ táneas papuloerítematosas, muy pruriginosas, tanto
tornas. en las zonas de las picaduas, como en regiones
Los triatomídeos presentan un desarrollo herni­ alejadas de la piel, que evolucionan durante algunos
rnetabólico o metamorfosis incompleta con fases de días para luego desaparecer. A veces es menester el
huevo, cinco estadios ninfales y adulto, caracteri­ uso de antihistamínicos.
zado por ser lento y prolongado, pudiendo durar
varios meses, influenciado por la temperatura y Acción expoliatriz. Corno se trata de insectos
humedad del ambiente y por la disponibilidad de relativamente grandes con gran capacidad hema­
alimento. Todos los estadios ninfales y los adultos tofágica, el volumen de sangre expoliado puede pro­
de ambos sexos son hematófagos estrictos. Sólo la ducir anemia, especialmente en individuos poli­
alimentación sanguínea en cada uno de los cinco
Proboscida carenciados.
estadios ninfales, permite el paso a la fase siguien­
te. Además, a diferencia de otros insectos hemató- Figura 53-3. Cabeza de redúvidbpara mostrar la posició� Vectores biológicos del Trypa110s0111a cruzi.
Figura 53-1. Triatoma infes/ans.
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,I de reposo de la trompa picadora. Sin duda, la mayor importancia médica de los tria-
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4}8 PARASJTOLOGIA MEDICA TRIA TOMAS. CHINCHES Y CUCARACHAS 479

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Figura 53-4. Rancho chagásico con condiciones favorecedoras para la proliferación de triatominos y la instauración
del ciclo doméstico del Trypa11osoma cruzi.

TABLA 53-)
Figura 53-5. Típico aspecto de las paredes de un rancho, aptas para el desarrollo de los triatomas.
PRINCIPALES ESPECIES DE TRIATOMIDEOS EN LA ENFERMEDAD DE CHAGAS DEL HOMBRE.

Especies Distribución geográfica Países


tomideos reside en su eficaz papel como vectores das estrechas, mal ventiladas y obscuras, mal man­
Tria/ama i11Jesta11s Extensas áreas de Sudamérica, desde la Argentina, Bolivia, Sur de biológicos del Trypanosoma cruzi (véase el Capítulo tenidas, con un alto hacinamiento de habitantes y
Patagonia Argentina a la región subtropical. Brasil, Chile, Paraguay, 28: Enfermedad de Chagas). Al ingerir sangre de un animales domésticos, y cuya estructura es propicia
Perú, Uruguay. mamífero infectado, los tripomastigotos se transfor­ para la acogida y guarida de triatominos: paredes ile
man en epimastigotos a nivel del intestino me.dio del adobe sin enlucir, llenos de oquedades y techos
Pa11stro11gylus megistus Desde Guayana hasta el norte de Argentina, Principal vector en Brasil insecto, se multiplican muy activamente y en 15-20 cubiertos de paja o ramas. El entorno adyacente de
):.
¡1.
+ Brasil (Mallo Grosso, Goias), Paraguay y días, se desarrollan los tripomatigotos metacíclicos la casa se completa con las dependencias de los
Bolivia. en el intestino posterior. Cuando de nuevo pica a un animales domésticos y sinantrópicos como son ga­
l"'• Rhod11ius prolixus América Central y norte d_e Sudamérica. Principales vectores en mamífero susceptible, el triatomídeo emite deyec­ llineros, corrales, conejeras, cuyeras, etc., que ofre­
l.
Venezuela y Colombia. ciones con estos tripomastigotos, transfiriendo la cen sitios privilegiados para los insectos
infección por el sitio ·de la picadura o por las muco­ hematófagos.
;: Triatoma di111idiata América Central y norte de Sudamérica Principal vector en Costa sas. Las especies más eficientes en la mantención del De tal forma, debe procurarse la mejoría de la
iji
Rica y otros países de ciclo doméstico de la enfermedad de Chagas, son vivienda rural y suburbana, la construcción de casas
América Central y Colombia, aquellas mejor adaptadas a la vivienda y al entorno más sólidas y amplias, con paredes no agrietables,
Ecuador, Perú y Venezuela. del hombre, como son Triatoma infestans, Rhodni11s techo enlucidos, con adecuada ventilación e ilumi­
Triat0111a brasiliensis Zonas secas del Noreste de Brasil Brasil proltx11s y Panstrongy/11s megistus (Tabla 53-1). nación, y procurar también la mejoría de la estructura

'.i Tria/ama sordida De Río Grande do Su! hasta el Noreste Brasil Control
y mantención de las dependencias de los animales
domésticos, cuidando que estén relativamente aleja­
l1
Triato111a rubrofasciata
de Pernambuco.
Desde América Central y Antillas Brasil Vivienda rural y suburbana. La principal medida
das de la casa.
Si bien estas medidas son las más eficaces en la
hasta norte de Argentina. Los mayores de control para evitar el triatomismo domiciliario, lucha antitriatomídea, su implementación es de un

1
F focos ocurren en Brasil. consiste en mejorar la calidad de la vivienda rural y costo tan alto que muchas veces escapa a la capa­
sus dependencias. cidad económica de sus moradores. Por esta razón,
Pa11stro11gylus ge11iculatus .. Región neotropical desde Panamá hasta Brasil En el paisaje rural y suburbano de América Lati­ en esta lucha se necesita la implementación y ayuda
el sur de Brasil. na, destaca la presencia de los llamados "ranchos social de las instituciones gubernamentales y del
Tria/ama spi110/ai Norte y Centro de Chile Chile (ciclo silvestre) chagásicos", denominación que reciben las vivien- estado, para que no queden sólo como el enunciado
de buenos propósitos y sin posibilidad de ejecución.
-480 PARASITOLOGIA MEDICA TRIATOMAS, CHINCHES Y CUCARACHAS 481

BLATIDOS
Insecticidas. Un importante complemento de las
medidas de mejoramiento de la vivienda, es el empleo ooteca
1
de insecticidas de acción inmediata y residual. Se

�(]�
utilizan insecticidas organoélorinados y
organofosforados, entre los cuales el más empleado

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es el Iindano. En esta operación deben ser rociadas
todas las viviendas simultáneamente para evitar la

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reinstalación de insectos en los casas fumigadas, a

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partir de las no tratadas. Para asegurar una mejor
acción, los insecticidas deben ser rociados con una
fuerte presión para asegurar su penetración en grie­
tas y escondrijos de los triatomídeos, deben abarcar
toda la casa: paredes, entretechos, bodegas y de­ ninfas
pendencias de los animales domésticos, así como
muebles y otros enseres de la casa. Luego de esta

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fase de ataque, debe establecerse una vigilancia epi­
demiológica capaz de detectar cualquier rebrote de
infestación de la vivienda.

Educación para la salud. Su objetivo es llegar a


crear hábitos de aversión hacia el insecto por parte
de la comunidad y comprometerla en la labor de
vigilancia epidemiológica para denunciar su presen­
Figura 53-7. Ciclo evolutivo (metamorfosis gradual o incompleta) de las cucarachas.
cia. Esta acción de promover el conocimíento de la
�.......·· .
biología y hábitos de los triatomídeos, además de los
riesgos de salud por su presencia debería abarcar y
� lesiones papuloerítematosas muy pruriginosas y que Son de aspecto repugnante y despiden un fuerte olor
comprometer a todos los habitantes y especialmente Figura 53-6. Gime."< /ectulariw;. pueden ser de intensidad muy variable según las fétido.
a nivel escolar donde los profesores pueden aportar reacciones a la saliva del insecto. A veces provoca Presentan un ciclo evolutivo hemirnetabólico o
toda su ayuda. Se debe insistir en el aseo de la casa insomnio y la hematofagia repetida puede provocar metamorfosis incompleta, cuya duración desde hue­
y sus dependencias, reparaciones de paredes y te­ nidos en las grietas de muros y paredes, especial­ anemia. En condiciones naturales, no se ha compro­ vo, estados ninfales hasta adultos, demora varios
chos, elimínación de enseres inútiles, impedir la es­ mente si están empapeladas, y en muebles de madera bado que Cimex actúe como vector biológico de meses (Figura 53-7). Coloca sus huevos en una en­
trecha convivencia dentro del hogar con perros y y camas en los dormitorios. Son insectos gregarios ninguna infección. voltura u ooteca que mantiene en lugares húmedos
gatos, etcétera. que salen en conjunto en procura de sangre de sus y obscuros. En la ooteca maduran los huevos, en
hospederos, los que generalmente están en reposo. Control número de l 6 a más de 40 según las especies, dando
CHINCHES DE CAMA El inicio de una colonia de insectos en una determi­ origen a los estados ninfales (Figura 53-8).
nada vivienda, puede partir de una sola hembra que Cimex es muy sensible a la acción de los insec­ Las cucarachas son lucífugas, por lo cual reco­
Son hemípteros hematófagos pertenecientes a la pasivamente es transportada en muebles antiguos, ticidas de acción residual. Por esta razón, además de rren las habitaciones durante la noche. Son
familia Cimicidae, siendo de trascendencia parael hom­ cestas, cajas u otros utensilios. la moderna decor¡¡ción de la vivienda, de sus muros omnívoras, alimentándose de los más variados ele­
bre dos especies cosmopolitas: Cimex lectularius que Presentan un desarrollo hemimetabólico o meta­ y empapelado, así como el uso de muebles cada vez mentos (alimentos, vegetales, madera, papel, ropa,
preferentemente prevalece en zonas de clima templado morfosis incompleta con estadios de huevo, cinco más funcionales, ha provocado la progresiva dismi­ materias fecales, etc.) y son muy voraces y dificiles
y C. hemipterus más frecuente en zonas tropicales. estados ninfales y adultos, que se prolonga entre 37 nución y desaparición de esta plaga. de saciar; ingieren hasta hartarse, vomítan sobre los
Son de aspecto ovoideo, aplanados dorsoven­ y 128 días, aunque puede prolongarse más días por alimentos y vuelven a comer. Durante el día perma­
tralmente, de color café rojizo y míden alrededor de la marcada resistencia al ayuno. Los adultos viven CUCARACHAS necen inactivas en lugares húmedos y obscuros,
8 mm de longitud. La cabeza y el tórax son pequeños entre 1-5 meses y pueden soportar largos períodos especialmente en baños y cocinas y salen en la
comparados con el abdomen voluminoso. Sus apén­ de ayuno. Son insectos del orden Blattaria formada por una noche en busca de alimento.
dices no están adaptados para permanecer por mu­ La hembra coloca entre 200-500 huevos, en pos­ multitud de especies silvestres y algunas que tienen Las principales especies de cucarachas domésti­
cho tiempo sobre su hospedero, puesto que cada turas de l0-50 por vez, son de color blanco-amarillen­ trascendencia médica. Se caracterizan por tener un cas son:
picadura y acción hematofágica no se prolonga más to, de alrededor de l mm de longitud. Al cabo de contorno elipsoidal, aplanadas !forsoventralmente,
de 5 a l O minutos. Los adultos son ápteros y en las unos l O días. emergen las ninfas y cada estado ninfa! de tamaño entre l a 5 cm, de color café de diversos Blattela ger111a11ica: pequeña ( l-1,5 cm), de co­
ninfas sólo hay alas vestigiales. Las chinches des­ para seguir su evolución debe alimentarse de sangré tonos, según las especies. Poseen una cabeza trian­ lor café amarillento, cuyo ciclo evolutivo es de un
piden un olor desagradable, producto de la secre­ por lo menos una vez. gular provista de dos largas antenas y aparato bucal mes, vive unos tres meses y es de distribución cos­
ción oleosa de unas glándulas torácicas y probable­ triturador. El tórax y el abdomen se presentan mopolita.
mente constituya una defensa, c_ontra, predadores, µnportancia médica adosados entre sí. Las patas son bien desarrolladas
Las chinches son especies domiciliarias, de há­ y aptas para correr. Sus dos pares de alas son atrófica Blatta orie11talis: mide 2-3 cm, de color café
bitos nocturnos. En el día se guarecen y hacen sus Las picaduras de las chinches de cama provocan en la mayoría de las especies y la mayoría no vuela. obscuro caoba, con un largo ciclo evolutivo que
PARASITOLOG/A MEDICA TRIATOMAS, CHINCHES Y CUCARACHAS 483
.. 4g2
da, por su condición de omnívoras y su voracidad, lamentos es necesario mantener el aseo de calderas e
pueden destruir, contaminar e inutilizar grandes can­ incineradores de basura. Cuando se ha detectado la
tidades de alimentos, enseres, ropa y cualquier ele­ presencia de cucarachas en el hogar, a las anteriores
mento orgánico que encuentren a su paso. medidas de higiene y protección, se debe sumar el
Las cucarachas pueden ser hospederós interme­ empleo de insecticidas de acción residual.
diarios de algunas especies de acantocéfalos, cuyos
hospederos definitivos son vertebrados, principal­
mente el cerdo y que raramente puede afectar al BIBLlOGRAFIA
hombre (ver el Capítulo 1: Elparásito). Los huevos
eliminados por el hospedero vertebrado, son ingeri­ Brener Z, Andrade Z. Trypanosoma cnizi e Doen9a de
dos por escarabajos y cucarachas, en el hemocele de Chagas. Rlo de Janeiro: Guanabara Koogan, 1979.
estos artrópodos se desarrollan sucesivamente el García-Zapata MT, Schofield CJ, Marsden PD. A simple
acantor, la acautela y el cisticanto. El ciclo se com­ method for detecting the presence of live triatomine
pleta cuando se ingieren los artrópodos infectados. bugs in houses sprayed with insecticides. Trans Ro
1 En el hombre se ha encontrado parasitación por Soc Trap Med Hyg 1985; 79:558-9.
1,. Macra11thorhinch11s hirudinaceus y Moniliformis Lehane MJ, Me Ewan PK, Whitaker LJ, Schofield CJ. Tbe
moniliformis.
role oftemperature and nutritional dependence in flight
Control by Tria/ama infestans. Acta Tropica 1992; 52:27-38.
Schofield CJ, Dias JCP. A cost-benefit analysis of Cha­
Es fundamental la higiene y protección de las vi­ gas' disease control. Mem Inst Oswaldo Cruz 1991;
viendas, especialmente en cocinas, baños, reposte­ 86:285-95.
ros y bodegas. Se debe evitar dejar restos de comida, Schofield CJ. Triatomine. Biología y Control. UK: Euro­
alimentos desprotejidos o real.izar una mala elimina­ communica Publications, 1994.
ción de basuras, elementos que constituyen focos de WHO. Control ofChagas' disease. WHO Technical Report
atracción de las cucarachas. En los edificios de <lepar- Series 8ll, Geneva, 1991.

1,(1
il .
11l .
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l.:
¡: Figura 53-8. (A) B/atta orienta/is y su ooteca. (B) Perip/aneta americana. (C) P. americana con la ooteca emergiendo
por el extremo posterior del abdomen. (D) Detalle, en aumento, de una ooteca.

1
1, puede durar dos años, sobrevive hasta seis meses y mecánicos. Vive en sitios obscuros y húmedos como
es propia de zonas de clima templado. alcantarillado y basurales e invaden las casas refu­
giándose en los lugares que mejor ofrecen alimento
Peripla11eta americana: mide 3,5-4 cm, de co­ como son las cocinas, reposteros, bodegas y despen­
lor café pardusco, también de ciclo evolutivo largo sas.
( l a 3 años), sobrevida es de unos tres meses, de Al igual que la mosca, actúa como vector mecá­
:·" nico de bacterias, parásitos, hongos y virus que
distribución cosmopolita.
i transporta en sus correrías tanto en la superficie de
Importancia médica su cuerpo como en su tubo digestivo (vómitos y
deyecciones). También es importante el dañ� �co­
Su rol más importante es su acción como vectores nómico de la presencia de cucarachas en la v1v1en-
- Capítulo 54 PARAS/TOLOGIA MEDICA SARNA Y OTRAS ACAROSIS 485

Epidemiología también se observa en la sama típica. En esta últi­


SARNA Y OTRAS ACAROSIS ma, además, se observa un infiltrado a nivel de la
La sama es una ectoparasitosis cosmopolita, más dermis, en las regiones perivasculares, de tipo mix­
frecuente en países templados y fríos. Por ser su to consistente en linfocitos, histiocitos y eosinófi­
TIRZASAAVEDRA mecanismo de transmisión directo, es una enferme­ los, que puede extenderse hasta el tejido graso sub­
dad de tipo familiar o de grupos cerrados, en los cutáneo y en algunos casos, provocar vasculitis
cuales se observa que la posibilidad de contagio es especialmente de los plexos profundos. Ocasional�·
de un 73-85%, siendo, por lo tanto, importante los mente se encuentra trombosis de los vasos de los
factores de hacinamiento y promiscuidad. La posi­ plexos superficiales.
bilidad de infección a través de fomites es escasa. Lesiones espongióticas pueden ocurrir en la
La sarna o escabiosis es una ectoparasitosis de del cuerpo, dándole aspecto de cabeza. Las patas La higiene personal necesariamente no evita el epidermis y en la dennis bajo la zona de los surcos
tipo familiar, que ha afectado al hombre desde la son cortas y robustas, dispuestas en dos pares contagio, pero puede variar la fonna de presenta­ y frecuentemente en la vecindad de los huevos o
antigüedad, pero no fue hasta 1687 cuando se fa anteriores y dos pares posteriores, están provistas ción clínica, haciendo la enfermedad más leve y de heces del ácaro; esto se observa principalmente en
relacionó con la presencia de un ácaro en la piel. Sin de órganos a modo de ventosas situados en los más dificil diagnóstico. la sama noruega, donde la epidennis toma· un as­
embargo, sólo a fines del siglo XIX, se aceptó que extremos de unos largos pedicelos no articulados en La edad es un factor que influye en la prevalen­ pecto psoriasifonne.
el Sarcoptes scabiei es su agente causal. los dos primeros pares de patas de las hembras y en cia de la sama, pues se ha demostrado que es mayor El infiltrado mononuclear de la dermis está dado
A lo largo de la historia, se han descrito brotes primero, segundo y cuarto par de patas de los ma­ en la infancia que en el adulto. Los ancianos asilados principalmente por linfocitos T, seguido de macró­
epidémicos de sarna cada 20-30 años, aproximada­ chos. Las otras patas terminan en cerdas largas (ca­ o en casa de reposo también tienen un aumento en fagos y linfocitos B. Estos linfocitos T producen
mente, coincidiendo con períodos bélicos o cambios racterísticas de la especie). su prevalencia. No hay diferencias por sexo. linfocinas que sólo inhiben el factor de migración
en el comportamiento de la sociedad. Unos de los Tienen un ano terminal en ambos sexos. En la Se ha observado que la sama aumenta en otoño de leucocitos cuando son estimulados por la
últimos brotes infonnados en Europa y Norteamérica hembra la apertura de la bolsa copulatriz está en el e invierno, disminuyendo en primavera y verano.. fitohemaglutinina.
es el de la década de los años 60, el cual habría lado dorsal, algo anterior a la región anal, presentando La tendencia al hacinamiento en invierno favorece En algunos pacientes se ha observado la presen­
comenzado entre 1963-1964. una abertura genital por donde elimina los huevos, su transmisión y a su vez, en verano las personas cia de depósitos de C3 en la unión dennoepidénnica
La sarna se ha mantenido en fonna endémica en ubicada_ en la línea media de la superficie ventral. El tienden a bañarse más, lo que elimina algunas for­ y en otros también se ha demostrado depósitos en
diferentes países, en relación al nivel socioeconómi­ aparato genital masculino está en la linea media de mas juveniles de ácaros en la superficie de la piel, las paredes de los vasos del dermis de C3, IgA, IgM
co y cultural de la población, la época del año, las la región ventral, entre el ano y la parte donde emerge asociado a la mayor exposición a la luz ultravioleta, e IgE, encontrándose esta última también en la
características geográficas del país y la ocurrencia el tercer y cuarto par de patas. que también tiene un efecto acaricida. superficie de los ácaros y sus deposiciones.
de catástrofes naturales. El ciclo del parásito se realiza en el estrato córneo Su prevalencia fue muy alta en la antigüedad En relación a la respuesta humoral observada en
El hombre, desde el punto de vista epidemiológi­ de la epidermis, donde las hembras son fecundadas, por la falta de higiene y de tratamiento específico. los pacientes con infección escabiótica aguda, se
co, se considera como el principal reservorio de la ya sea en la superficie de la piel o en el interior de En los últimos años, ha disminuido por los cambios han detectado .cambios de las inmunoglobulinas
sarna humana, provocada por el ácaro Sarcoptes pequeñas galerías en el estrato córneo. Posterior­ higiénicos, estándares de vida, tratamientos más séricas, una disminución del nivel de IgA que vuel-.
scabiei variedad hominis. Se han descrito diferentes mente las hembras excavan estrechas galerías o tú­ adecuados y probablemente, por aumento de la po­ ve a la normalidad después del tratamiento; en cam­
ácaros que parasitan específicamente a sus respec­ neles qué pueden medir entre unos pocos mm hasta blación inmune a adquirir la enfennedad. bio, la IgG y la IgM se encuentran altas durante lá
tivos animales provocándoles patología también tres cm de longitud (diariamente el parásito excava En Estados Unidos, durante el período 1937- infestación y disminuyen después del tratamiento.
específica. Los ácaros de animales pueden parasitar entre 0,5-5 mm), en donde va colocando sus huevos 1983, presentó variaciones en su incidencia (5,4% También hay un aumento de la IgE durante las
la piel del hombre produciendo cuadros denníticos y deyecciones en un lapso de 4-6 semanas, tiempo en 1945; 0,0% en 1955;1,0% 1960; 3,6% en 1976, primeras semanas de la infestación, lo que sugiere
no característicos, autolimitados y en la zona de ·'al cabo del cual muere. con una reducción en los años posteriores). un papel protector, disminuyendo después del trata­
contacto con el animal parasitado. Los huevos que la hembra coloca, en número de En Chile, estudios realizados en 1975 y 1981 miento. Estos cambios no están relacionados a la
dos a tres por día, con un total de treinta y cinco a demostraron una prevalencia en la ciudad de San­ presencia o intensidad del prurito que presenta el
SARCOPTESSCABIEI cincuenta miden 160 µm de longitud, tienen fonna tiago de 5,0% y 3,0%, respectivamente. Actual­ paciente con sama.
ovalada y de ellos eclosionan larvas hexápodas al mente es de 1,0%. Se han producido brotes epidé­ Los antígenos del cuerpo del ácaro, sus deposi­
Sarcoptes scabiei es un ácaro del suborden cabo de 3-8 días, que se parecen a los adultos, pero micos en diferentes regiones del país que han sido ciones y secreciones son responsables de las reac­
Acaridida, de tamaño pequeño, redondeado u ova­ con ausencia del cuarto par de patas. Estas larvas eficientemente controlados. ciones de hipersensibilidad en la sarna.
lado, no segmentado, aplanado dorsoventralmente y hexápodas emergen a la superficie de la piel y se Se ha demostrado que hay depósito de comple­
con cuatro pares de patas cortas. transfonnan en ninfas octópodas al cabo de 2-3 días Patología jos inmunes tanto en las lesiones inflamatorias como
Blancuzcos, apenas visibles a simple vista, ya y mudan en dos oportunidades antes de transfor­ en los nódulos escabiosos.
que el tamaño de las hembras es de 300-500 µm de marse en adultos machos y hembras. Todas las for­ La pennanencia de S. scabiei en la epidennis
largo por 230-420 µm de ancho y los machos miden mas juveniles, tanto larvas como ninfas, pueden tiene como resultados diversos cambios citológicos, Clínica
sólo 213-285 µm de largo por 162-210 µm de ancho. excavar túneles en la epidennis, donde se alimentan probablemente debido a secreciones citolíticas de la
Están cubiertos por una cuticula muy fina en la cual de detritus celulares. La duración de los dos perío­ saliva del ácaro; esta citólisis puede continuar hasta La sarna se caracteriza por ser una enfennedad
se dibujan líneas ondulantes paralelas y presentan dos ninfales es de 3-6 días, por lo cual el desarrollo la unión dennoepidénnica, pero no afecta las fibras intensamente pruriginosa, transmitida habitualmen­
cerdas o pelos salientes. No tienen ojos ni tráqueas; completo del ácaro es de 8-14 días. La hembra vive colágenas del dennis. Las células adyacentes a las te por contacto directo prolongado (como mínimo
las piezas bucales consistentes en un par de 4-6 semanas, en tanto que el macho muere después áreas necróticas sufren modificaciones en su proce­ 10 minutos) de una persona infestada con otra.
quelíceros y un par de pedipalpos triangulares, están de la cópula. so de queratinización, produ9iéndos_e parf\queratosis El prurito va aumentando progresivamente de
fijados a un gnatosoma, situado en la parte frÓntal que rodea a todo el surco acarino. Este proceso es intensidad en el tiempo. En general, comienza de
más fácil de observar en la sama noruega, pero noche al acostarse, para luego sentirse a cualquier
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1

A86 PARASITOLOGIA MEDICA SARNA Y OTRAS ACAROSIS 487

hora del día, aunque en la noche siempre su inten­ Existe también la "sarna del limpio", en la que mayoría de las lesiones son primariamente causa­ Tratamiento
sidad es mayor, pudiendo, incluso, producir insom­ a pesar de los hábitos de limpieza del paciente, das por Streptococcus pyogenes y secundariamente
nio. El prurito puede ser de todo el cuerpo a excep­ puede existir prurito, pero prácticamente no se ob­ invadídas por Staphylococcus aureus. La glomerulo­ Es fundamental que sea dirigido al enfenno, a la
ción de la cabeza y la espalda, hecho observado en servan lesiones. También se ha descrito "la sarna nefritis aguda fue asociada sólo en 1954 a las sarnas familia y a los contactos directos.
pacientes inmunocompetentes. del incógnito", en la cual por error diagnóstico infectadas, siendo provocada por el Streptococcus Existen numerosos tratamientos en la actuali­
A pesar de que puede ser obvia en su presenta­ médico, las lesiones están modificadas por el trata­ pyogenes de la cepa M-55 (cepa nefrotóxica). dad, pero se debe elegir el adecuado al paciente,
ción, en la sarna muchas de las lesiones que se miento y uso de corticoides tópicos y/o sistémicos. dependiendo de su edad, presencia de escoriaciones
producen pueden confundir el diagnósticos. Se des­ La sarna en los niños pequeños o lactantes, Diagnóstico o infecciones y el tipo de sarna para lograr una
criben dos tipos de lesiones, unas directas provoca­ aunque puede presentar el mismo cuadro clínico de mayor eficiencia y una menor toxicidad.
das por el ácaro mismo y otras indirectas resultado la sarna de un adulto, tiene ciertas dife'rencias clí­ El diagnóstico de la sama es habitualmente clí­ Los medicamentos más utilizados son:
de reacciones de hipersensibilidad. nicas probablemente provocadas por la diferente nico, basado en el prurito de predominio nocturno,
distribución de las unidades pilosebáceas, el grosor el antecedente de algún contacto familiar, laboral o Lindano al 1 %. Es un excelente insecticida de
Lesiones directas. Perla escabiosa y surco aca­ del estrato córneo y la disminución de la producción social y el tipo y distribución de las lesiones. efecto residual, permanece activo durante un mes si
rino. La perla escabiosa o vesícula perlada de Ba­ de sebo. Hay lesiones en cara, cuello, espalda, re­ Los surcos acarinos se observan como trayectos no se le retira de la piel. Un 10% de lo aplicado se
zin, son lesiones vesiculares de no más de I mm de gión retroauricular, palma de manos y planta de irregulares, con mayor frecuencia localizados en la absorbe, va a la sangre, atraviesa la barrera hemato­
diámetro que aparecen en el sitio donde el ácaro pies. También se ha descrito, una complicación de región interdigital de los dedos o cara anterior de encefálica y se excreta por la leche materna y por la
hembra se introduce al cavar un túnel, provocándose la sarna en los niños como es la acropuswlosis muñecas, pudiendo hacerse más evidentes si se pin­ orina. Es neurotóxico y puede provocar además
una reacción inflamatoria con engrosamiento de la palmo-plantar en la cual hay pápulas y vesículo­ tan con lápiz pasta o se les llena con un poco de anemia aplástica y otras discrasias sanguíneas por
capa córnea, aumento en el número y profundidad pústulas estériles, intensamente pruriginosas que tinta. aplicaciones múltiples o ingestión accidental. Se
de las papilas dérmicas y formación de una vesícula pueden involucionar espontáneamente después de El ácaro test es un examen directo que demos­ aconseja no usar en lactantes menores, personas
con contenido líquido en el epitelio. meses o años, pues no responden a los antihista­ trará la presencia de S. scabiei, restos de ácaros, anoréxicas, ancianos, atletas, mujeres embarazadas
Los surcos acarinos constituyen la manifesta­ mínicos ni a los corticoides. huevos o deyecciones. Originalmente se usaba una y durante el período de lactancia.
ción externa de los túneles que realizan las hembras La sarna del paciente inmunodeficiente (pacien­ cinta adhesiva transparente que se adosaba sobre Una indicación adecuada de lindano tiene una
en el estrato córneo de la epidermis y su respectiva tes con SIDA, ]eucémicos, en quimioterapia, desnu­ zona escarificada y luego se colocaba sobre un eficacia de 90-95%. Se ha demostrado resistencia al
reacción inflamatoria; se forman trayectos lineales tridos, diabéticos, con defectos inmunológicos, con portaobjeto y se miraba al microscopio. Ultima­ lindano en pacientes imnunodeprimidos.
eritematosos, de tipo serpiginoso, que pueden me­ trastornos neurológicos y en niños mongólicos), es mente se ha mejorado el rendimiento de esta técni­ La aplicación debe efectuarse al paciente y gru­
dir milímetros o centímetros (Lámina 35). Estas le­ la denominada sarna noruega o costrosa, nombre ca raspando la epidennis con un bisturí, recogien­ po familiar al mismo tiempo, desde el mentón hasta
siones se ubican desde el cuello a los pies, distribui­ que ha recibido después de su primera descripción do los restos epidénnicos obtenidos sobre un porta­ los pies, con guante· de goma o brocha (no usar
das en los pliegues corporales o donde la piel es más realizada en leprosos de Noruega en 1852. Se carac­ objeto, agregando KOH al 10%, dejando macerar. algodón o telas), y posterionnente deben vestirse en
delgada: región interdigital de los dedos de las ma­ teriza por una hiperqueratosis de la epidermis, poco unos minutos, luego de los cuales se cubre con una fonna inmediata para que la ropa se impregne con
nos, cara anterior de muñecas, cara interna de brazo, pruriginosa, en la cual se observan costras grisáceas, laminilla y se mira al microscopio. El rendimiento el insecticida, el que deberá pennanecer sobre la
antebrazo y axila, surco submamario, flancos, re­ gruesas y adherentes, ocasionalmente sobre un fon­ de esta técnica varía entre el 60 y el 70%, depen­ superficie corporal por lapso de tres días (sin bañar
gión genital, surco subglúteo y cara interna de mus­ do eritematoso, ubicadas en las superficies no diendo del sitio de la toma de muestra, que debe ser ni cambiar de ropa); luego de lo cual se indica bañó,
los, rodillas y tobillos. En un adulto inmunocom­ flexoras, pecho, espalda, cabeza, detrás de las ore­ en una perla escabiosa, surco acarino o nódulo cambio de ropa de vestir, sábanas y toallas, las que
petente no se ven lesiones en palma de manos, planta jas, palmas de manos y plantas de pies. Frecuente­ escabioso y de la experiencia del microscopist8c. deben lavarse o hervirse. Se debe repetir la aplica­
de pies ni espalda. mente se comprometen los lechos unguea]es de Por lo tanto, un ácaro test positivo confirma el ción de lindano al séptimo día, debiendo permane­
. manos y pies, observándose uñas engrosadas, que diagnóstico, en tanto que uno negativo no lo des­ cer sobre la superficie corporal por otros tres días.
Lesiones indirectas. Son lesiones de distribu­ podría confundir el diagnóstico con una onicomi­ carta. El rendimiento de este examen es máximo en Este esquema de tratamiento está basado en el
ción bilateral y simétrica, intensamente prurigino­ cosis. Otra característica importante es su alta la sarna noruega, debido a los miles de ácaros que ciclo del parásito, pues el lindano mata formas ju­
sas, más generalizadas, habitualmente papulares y contagiosidad, porque debajo de cada costra existen están parasitando al hospedero; en cambio, en la veniles y adultas, pero como no es ovicida, no des­
no necesariamente asociadas a los sitios que invade millares de ácaros que pueden ser fácilmente trans­ sarna habitual donde no hay más de 30-50 ácaros truye los huevos, pero a medida que éstos eclosio­
el ácaro. mitidos, aunque el contacto sea mínimo. provocando todo el cuadro, el rendimiento es me­ nan (3-8 días), la presencia del lindano sobre la piel
Además de las pápulas se pueden observar esca­ nor. destruye a las larvas que van emergiendo a la super­
mas, vesículas-bulas, erupción micropapulosa, nódu­ Colhplicaciones La biopsia de piel no se utiliza de rutina y suele ficie de la piel.
los, costras y escoriaciones por grataje. Los nódulos efectuarse sólo con fines docentes o por error diag­ Existen otros esquemas de tratamiento con lin­
acarinos se pueden observar en codos, axilas, flan­ Entre las complicaciones de la sarna son fre­ nóstico. Tiene características especiales en la sarna dano como, por ejemplo, aplicarlo por tres días
cos, escroto, pene y pliegue subglúteo, habitual­ cuentes las dermitis e incluso cuadros de urtícaria y noruega en donde, además de la espongiosis e continuos, con baño previo, posterionnente cuatro
mente en pacientes con antecedentes atópicos. eritema polimorfo. Es frecuente observar en muje­ hiperqueratosis, se observa gran cantidad de áca­ días de descanso y otras tres nuevas aplicaciones, lo
El cuadro clínico se caracteriza por el prurito res nulíparas la dermitis del pezón, con lesiones ros. que expone a mayor neurotoxicidad y dennitis por
que no aparece hasta después de 15-50 días de la periareolares de las mamas que incluyen desde pápu­ el mayor volumen de lindano aplicado.
infestación po'r ser una reaccíón de hipersensibili­ las eritematosas intensamente pruriginosas hasta Diagnóstico diferencial
dad; en tanto en las reinfestaciones el prurito apa­ lesiones eritematosas y resumantes de toda la mama. Decametrina al 0,02%. Es un derivado pire­
rece entre las 24 a 48 horas después del contagio. Otra complicación frecuente provocada por el El diagnóstico diferencial de la sarna se debe troide y su esquema de aplicación es similar al
Este cuadro que se observa en el paciente adulto intenso grataje, son las piodermias que incluyen el realizar con enfermedades dennatológicas que pro­ lin<!al)_<J. Al!nque__ es más eficaz que el li_nd� no, � u
inmunocompetente, es diferente a lo observado en impétigo, celulitis, linfangitis e incluso glomeiulo­ voc�n prurito, principalmente dermitis de contacto, uso se ha visto restringido por la mayor mc1dencia
niños o pacientes inmunodeficientes. nefritis aguda dependiendo del agente causal. La dermitis atópica y picadura de insectos. de dermitis.
-488 PARASITOLOGIA MEDICA SARNA Y OTRAS ACAROSIS 489

Deltametrina al 0,02 %. Insecticida piretroide permanentemente a las poblaciones de riesgo para El tratamiento de la demodicidosis humana debe del Pacífico. Es transmitido por ácaros de roedores,
de poca toxicidad y alta eficacia, con escasa ocurren­ que eviten el contacto con personas sospechosas realizarse con aplicación tópica de permetrina al y algunos cuadros de encefalitis viral pueden ser
cia de dermitis. Su aplicación puede ser similar a la de tener la parasitosis. 5%,.crotramitón al 10% y/o tiabendazol al 5%. transmitidos por los ácaros de las aves como es el
del lindano, aunque de menor riesgo en aplicaciones Es fundamental realizar un diagnóstico oportuno Dermanyssus gallinae.
repetidas. y un tratamiento eficaz. Acarosis por ácaros de animales Conociendo los problemas que pueden ocasio­
Es el medicamento de elección en la sama norue­ El registro y denuncia de los casos debiera ser nar los ácaros no específicos del hombre, son im­
ga, asociada a vaselina azufrada al 6-10% (se aplica obligatorio para prevenir nuevos brotes epidémicos. El hombre puede presentar cuadros de dermitis portantes, como medidas de control, el aseo de las
o deja actuar la deltametrina los tres primeros días de y prúrigos provocados por ácaros parásitos de los viviendas, sitios de almacenaje e industrias, además
tratamiento, posteriormente se aplica vaselina OTROSACAROS animales, habitualmente hematófagos que sensibi­ de la aplicación de insecticidas y rodenticidas.
azufrada cuatro días y se repite el tratamiento a la QUEAFECTANALHOMBRE lizan al hombre con su saliva, observándose la pre­
segunda semana). sencia de lesiones maculopapulares, intensamente
Son artrópodos del orden Acarina, de la clase pruriginosas en la zona de contacto con el animal BIBLIOGRAFIA
Permetrina al 5%. Insecticida piretroide de alta Arachnida, que abarca un gra)l número de especies, infestado.
eficacia y poca toxicidad. Su aplicación puede ser la mayoria con cuatro pares de patas, dimorfismo Una de las más frecuentes es la provocada por el Andrews. Diseases ofthe skin. Clinical Demiatology. 8'"
diaria durante tres días, descanso de cuatro días y sexual. Como no ·existe división de su cuerpo en ácaro hematófago de las aves domésticas y silves­ ed. 1990.
reaplicar por otros dos a tres días. Puede utilizarse en cabeza, tórax y abdorp.en, su cuerpo tiene una forma tres (gallinas, palomas y gorriones) denominados Aubin F, Humbert P. Ivennectin for crusted (Norwegian)
niños pequeños, mujeres embarazadas y sama no­ ovalada o redonda y en su extremo anterior, semejan­ Dermanyssus gallinae y Dermanyssus avium, los scabies N Engl J Med 1995; 332:612.
ruega. do uná cabeza, están sus piezas bucales (quelíceros cuales producen lesiones dermíticas en sujetos que Burgess l. Sarcoptes scabiei and scabies. Advances in
Vaselina azufrada al 6-10%. Buen queratolí­ y pedjpalpos). No tienen alas y sus patas están están en contacto con pájaros o incluso oficinistas, Parasitology I 994; 33:235-92.
tico, pero no insecticida. Su aplicación debe realizar­ formadas por seis o siete segmentos (coxa, trocanter, pues existen palomas que tienen sus nidos cerca de Cabrera R, Agar A, Dahl MV. The immunology ofscabies.
se por tres días consecutivos, descansar cuatro días genua, tibia y tarso). los conductos de entrada del aire acondicionado. Semin Dennatol 1993; 12:15-21.
y volver aplicar otros tres días. Se ha utilizado en Generalmente presenta cuatro fases en el desa­ Otro ácaro hematófago de los múridos silvestres Calderón O, Sánchez C. Análisis de las poblaciones de
niños pequeños, mujeres eml:iarazadas y como trata­ rrollo de su ciclo evolutivo: huevo, larva, ninfa y y domésticos es Allodermanyssus sanguineus, por Sarcoptes scabiei (Acaridida: Sarcoptidae) en un
miento coadyuvante en sarna noruega. Puede pro­ adulto. lo cual se recomienda que junto con desratizar, se paciente con escabiosis noruega de Costa Rica.
vocar dermitis en pacientes con xerosis y dermatitis Existen en la naturaleza algunos subórdenes de debe aplicar insecticida en las madrigueras o sitios Parasitol al Día l995;19:57-60.
at�pica. vida libre que se alimentan de residuos orgánicos del habituales de pasada de los roedores. Corbett EL, Crossley1, Holton y coÍs. Crusted (Norwegian)
ambiente y otros que pueden ser zooparásitos y Existen Sarcoptes scabiei de otros animales que Scabies in a specialist HIV unit: Successful use of
Crotamitón al 10%. Muy buen antipruriginoso fitoparásitos que son capaces de provocar enferme­ pueden provocar dermitis en el ser humano que está ivennectin and failure to prevent nosocomial trans­
pero de escaso poder escabicida. Se recomienda en dad en el hombre. en contacto con estos animales infestados como son: mission. Genitourin Med 1996; 72:115.
niños, pero su aplicación debe ser múltiple para una pastores, ordeñadores, domadores y personal que Cox FEG. Modem Parasitology. A text book of Para­
mayor eficacia, lo que, sin embargo, podría favorecer Demodicidosis trabaja en viveros. Estos cuadros de dermitis son sitology. 2da ed. Oxford: Blackwell Scientific Pu­
en algunos pacientes la aparición de cuadros de diferentes en su cuadro clínico a la sama humana, blications, 1993.
metahemoglobulinemia. Producida por ácaros que viven en los folículos _ pues son localizados y autolimitados. Elder D, Elenitsas R, Johnson B, Jaworsky C. Parasitfo
Uno de los esquemas es aplicar desde el mentón pilosos y en las glándulas sebáceas de los mamífe­ Otros ácaros son capaces de provocar reacciones Infestations of the Skin. Lever's Histopathology of
a los pies por ocho días seguidos, o bien, tres días ros. Los géneros Demodex y Trombicula son pará­ alérgicas, al estar en contacto con ellos o cuando se the Skin. 8'" ed. Ed. David Elder et al. Philadelphia:
continuos, cuatro días de descanso y otros tres días sitos del hombre. les inhala, lo que desencadena una sensibilización Lippincot-Raven Publishers, 1997.
de aplicación. Del género Demodex se han descrito para el del hospedero humano. Uno de los más importantes Elgart ML. A risk-benefit assessment of agents used in
hombre dos especies: Demodexfolliculonim y Demo­ son los dermatofagoides o ácaros del polvo de las the treatment of scabies. Drug Saf 1996 14:386-93.
Tiabendazol al 5%. Se debe aplicar la crema al dex brevis, ácaros del folículo piloso de la cara, habitaciones: Dermatophagoides pteronyssinus Meiking TL, Taplin D, Hennida JL y cols. The tratment
5% dos veces al día por catorce días, por lo cual su pestañas, cejas, barba o glándulas sebáceas anexas; (mide 0,3 mm y se alimenta de células epiteliales ofscabies with ivennectin. N Engl J Med 1995; 333:26.
uso se ha restringido al tratamiento de los nódulos tienen un tamaño de 100-400 mm, con aspecto ver­ descamadas) está relacionado con cuadros atópicos, Meinking TL; Taplin D. Safety of pennethrin vs lindane
escabiosos, asociado a un corticoide tópico no miforme (cabeza corta y ancha, cuatro pares de patas fundamentalmente respiratorios (asma bronquial y for the treatment of scabies. Arch Dermatol 1996;
fluorado. cortas y un abdomen prolongado). Se ubican princi­ rinitis alérgica) y ocasionalmente cutáneos. De este 132:959-62.
palmente en la cara, alrededor de la nariz y de los ojos mismo tipo de ácaros sensibilizadores son los que Muñoz V, Urrea C. Hallazgo de artrópodos en el test de
Ivermectjna. Es otro medicamento promisorio en cantidad pequeña (no más de cinco en una mues­ proliferan en los sitios de almacenaje o de elabora­ Graham. Parasitol al Día 1993; 17:62-65.
pára el tratamiento antisámico, de baja toxicidad, de tra de una pápula examinada), pero un aumento exa­ ción de alimentos conio son el Tyrogliphus siro, Peterson CM, Eichenfield LF. Scabies. Pediatr Ann 1996;
administración oral y en una sola dosis. Este fármaco gerado de su número puede provocar cuadros Glycipltagus domesticus y Dermatopltagoidesfari­ 25:97-100.
es un antihelmíntico eficaz en el tratamiento de la inflamatorios más severos y crónicos denominados nae o ácaro de la harina que provoca el asma del Riffo P. Escabiosis de incógnito. Algunas consideracio­
oncocercosis. También se ha demostrado su eficacia panadero.
demodicidosis. Este ácaro también puede agravar nes conceptuales. Dennatología 1989; 5:102-03.
en el tratamiento de la escabiosis de pacientes los cuadros de acné rosácea e incluso, en los pacien­ Los ácaros de animales silvestres o domésticos Rook, Wilkinson, Ebling. Textbook of Dennatology. 5'"
inrnunocompetentes e inmunocomprometidos, en la
tes con SIDA, puede provocar lesiones papu­ pueden actúar como vectores biológicos de virus y ed. Oxford: Blackwell Scientific Publications, 1992.
dosis de 0,2 mg/kg/día. lonodulares de la cara, cuello y cabeza. rickettsias de algunas infecciones zoonóticas, como Schmidt GD, Roberts LS. Foundations ofParasitology. 4�
Prevención El Demodex de los perros, que es diferente al de por ejemplo, el tifus de matorrales o fiebre fluvial, ed. Saint Louis, Missouri: Times Mirror Mosby Co­
la especie humana, les produce un tipo de sama que existe en Japón, India, Filipinas y al_gunas Isl_�S-.. llege Publishing,1989.
La educación para la salud que .explique los severa, grave, de dificil tratamiento y a veces, mor­
mecanismos de transmisión debiera ser difundida tal.
Capítulo 55 PARASITOLOGIA MEDICA GARRAPATAS 491

GARRAPATAS ARGASIDAE
GARRAPATAS BLANDAS
IXODIDAE
GARRAPATAS DURAS
HECTORALCAINO

Las garrapatas constituyen junto a los ácaros el - La mayoría de las especies posee poca espe­
orden Acarina, más de 200 familias, l .700 géneros y, cificidad en cuanto a huéspedes. Sólo muy pocas
aproximadamente, un millón de especies. especies dependen de un único huésped, como es el
Las garrapatas (de mayor tamaño que los áca­ caso de Boaphilus anmilatus y B. microplus, que
ros), se agrupan en el suborden Ixodoidea, que se parasitan al ganado bovino, desarrollando sobre el
divide en dos familias: Argasidae "garrapatas blan­ animal tod_o su ciclo evolutivo.
. das" que incluye a los géneros Argas, Otobius y - Longevidad y duración del ciclo evolutivo: la
Omithodoros, y la familia Ixodidae que incluye 13 duración de la vida de algunas garrapatas puede
géneros, siendo los de mayor importancia Ambly­ llegar a varios años, considerando la gran capacidad
omma, Hyalomma,Dermacenlor, Boophilus, Ixodes, de ayuno de algunos estadios (principalmente nin­ Figura 55-1. En las garrapatas d_e la Familia Argasidae, el cuerpo es blando (sin caparazón escutelar), de cutícula lisa
Rhipiceplzalus y Haemaphysa/is. Los miembros de fas y adultos), y la capacidad de alargar su ciclo o irregular, con o sin borde nítido en su margen lateral, y el capitulum está ubicado en la cara ventral del parásito. En
esta familia se conocen con el nombre de "garrapatas evolutivo en casos de ambientes desfavorables. las Ixodidae, el cuerpo es duro (presentan caparazón escutelar), el capítulum se ubica en el polo cefálico del artrópodo,
duras", las que se diferencian de las "garrapatas - Alto potencial biótico: algunas especies depo­ emergiendo y es claramente visible.
blandas" por poseer un escudo quitinoso dorsal. sitan más de 20.000 huevos, como es el caso de
Ambas familias se diferencian básicamente por la Amblyomma hebraewn en el centro y sur de Africa.
posición relativa de la región anterior o capítulo Considerando estos antecedentes, es evidente la excremento�o enfermo. Sin embargo, el Dr. deposita en el suelo, bajo piedras, vegetales, árbo­
donde se ubican las piezas bucales: en los indivi­ importancia médica y epidemiológica de las garrapa­ Kilborne había notado una clara asociación entre la les, o bien en grietas de corrales, palomares, galline­
duos de la familia Argasidae, el capítulo se ubica en tas. Sin embargo, su capacidad de vector patógeno existencia de animales enfermos y/o muertos por ros, viviendas humanas o de animales.
posición anteroventral, y no es visible por su cara se conoció recién a fines del siglo XIX, cuando se piroplasmosis y la presencia de garrapatas, por lo La cantidad y forma de oviponer los huevos varia
dorsal. En cambio, en la familia Ixodidae el capítulo descubrió que ellas transmitían una enfermedad pro­ que se permitió plantear la posibilidad de transmi­ según se trate de garrapatas duras o blandas. Mien­
hace prominencia en la parte anterior del parásito, y tozoario (piropiasmosis) del vacuno. Este descubri­ sión de la enfermedad a través de ellas. Para él, el tras las primeras, después de alimentarse por varios
se observa claramente desde su cara dorsal (Figura miento marcó un hito en la historia de la Entomología hecho de que los propios ganaderos del oeste llama­ días, se dejan caer al suelo para realizar una sola
55-1). Médica, ya que con su demostración se estableció ban a la enfermedad "fiebre de las garrapatas", reafir­ postura en donde colocan entre dos mil y veinte mil
Prácticamente todos los vertebrados superiores por primera vez la posibilidad de transmisión de maba su especulación. Basándose en estos antece­ huevos, las segundas no ponen más de doscientos
a los peces en la escala evolutiva, están sujetos al agerites patógenos por medio de artrópodos. En dentes, llevó a cabo los primeros experimentos, cu­ huevos por vez, pero realizan varias oviposiciones
ataque de las garrapatas, siendo los mamíferos los aquel entonces, en Norteamérica, existía yos resultados fueron concluyentes, pues además después de sucesivas comidas de sangre.
huéspedes principales, debido a su homeotermia. piroplasmosis bovina en el estado de Texas y sur de de constatar la validez de su teoría; demostró la Los huevos de los ixodídeos después de varias
El alimento de las garrapatas consiste en sangre México. La enfermedad era conocida como "fiebre de existencia de una transmisión transovárica de las semanas de incubación, originan larvas hexápodas
y linfa de sus huéspedes, y todos los estadios evo­ Texas" y afectaba gravemente la producción de los babesias (desde garrapata madre a su cría) y trans­ muy pequeñas (de alrededor de I mm). Luego las
lutivos activos del parásito, es decir, larvas, ninfas rebaños. La mortalidad de los casos agudos fluctua­ estadial ( de larvas a la ninfa o de ésta al estado larvas realizan una muda (cambio de cutícula) y se
y adultos, son hematófagos. Este hecho unido a ba entre un 50 y 75%. La forma crónica era similar adulto). transforman en ninfas octópodas. Estas, también
otras características biológicas, confieren a las ga­ clínicamente, con signos menos intensos, pero igual­ Estos hallazgos constituyeron un estimulo para realizan una muda para convertirse en machos y
rrapatas singulares ventajas para constituirse en mente insidiosa, quedando los animales en una con­ que otros investigadores que abordaron la proble­ hembras adultas. Todas estas fases móviles (larvas,
vectores de diversas enfermedades infecciosas y dición muy desmejorada. mática de las enfermedades transmitidas por artró­ ninfas y adultos) se alimentan de sangre de sus
parasitarias de los animales y del hombre. Entre estas Debido a la magnitud del problema, el Departa­ podos en general y por garrapatas en particular, hospedadores por varios días hasta repletarse.
características se pueden mencionar: mento de Agricultura de los Estado Unidos, lomó a llegasen a acumular numerosos antecedentes en la Las especies que completan su ciclo de vida en
- Las garrapatas son parásitos hematófagos, su cargo el estudio de la "fiebre de Texas" para primera mitad del siglo XX. Se pudo establecer que un solo animal, se les denomina garrapatas de un
probablemente los primeros en especializarse en esta buscar una forma de control. Se comisionó al médico ellas eran responsables de la transmisión de huésped. En este tipo de garrapatas las larvas y
forma de alimentación. Theobald Smith como director de un equipo en el babesias, nematodos (ciertas filarias) y enfermeda­ ninfas se alimentan y cambian de cuticulas en el
- Se ftjan firmemente al huésped y no pueden ser que participaba el médico veterinario Frederick des bacterianas y virales. Tan sólo, entre 1955 y cuerpo del mismo animal y sólo las hembras fecun­
desprendidas fácilmente. Kilborne. En 1889, Smith realizó un importante des­ 1975 se habían descrito 110 arbovirosis transmiti­ dadas por los machos, se dejan caer al suelo para
- Los estadios finales de su ciclo evolutivo (nin­ cubrimiento al identificar en el interior de los das por garrapatas. desovar.
fas y adultos), son altamente resistentes al ambiente eritrocitos de un animal enfermo a la Babesia Las especies que completan su ciclo en dos ani­
por poseer gruesas cutículas quitinosas. bigemina, el agente causal de la "fiebre de Texas". Ciclo evolutivo males, se denominan garrapatas de dos huéspedes.
- Están relativamente libres de enemigos natura­ En ese tiempo se especulaba que la fuente de infec­ En éstas, las larvas se alimentan y sin dejarse caer al
les. ción de la piroplasmosis eran la saliva, orina y los La multiplicación de las garrapatas se realiza por suelo, mudan en el cuerpo del mismo animal y las
medio de huevos que la hembra, según la especie, ninfas emergentes, luego de alimentarse, abando-
492 PARASITOLOGIA MEDICA GARRAPATAS 493

vectores de virus, bacterias, rickettsias, espiroque­


tas y protozoos (Tabla 55-1).
La piel sufre el trauma producido por los
quelíceros cortantes del aparato bucal y la garrapata
se adhiere a la herida por su hipostorna dentado y
succiona abundante sangre. Corno consecuencia, se
produce la inflamación del corión, con hiperemia,
Hospedero I hemorragia y edema de la piel. Las heridas suelen
(6-2ldías) servir de puerta de entrada a infecciones secunda­
rias, especialmente cuando el capítulo se corta y
permanece fijado a la piel. En ovinos, vacunos,
perros, gatos y, ocasionalmente, en el hombre, se
producen cuadros de parálisis. La enfermedad se
Figura 55-3. Perro intensamente parasitado con Rhipice­ manifiesta corno una parálisis motora flácida as­
p!talus sa11guineus. cendente y progresiva, que se atribuye a la acción de
una toxina activadora de la acetilcolina sobre las
uniones neuromusculares, elaborada por los ovarios
y excretada por las glándulas salivales de la garra­
especie permanecen durante varios meses dentro de pata. Se produce ataxia , disfagia y parálisis muscu­
la oreja de sus huéspedes. La ninfa repleta cae al lar . Cuando aparece parálisis respiratoria, el enfer­
suelo en donde muda. Luego los adultos se aparean mo muere. La enfermedad ataca de preferencia a los
y ponen sus huevos en el mismo lugar, sin requerir niños y es particularmente grave en los menores de
de nuevas alimentaciones. dos años. El cuadro desaparece al extirpar la garra­
Todos los estadios móviles son capaces de vivir pata.
en ayunas por mire o tiempo. Así, a modo de ejem­
Hospedero fil plo, las larvas, ninfa adultos del R. sanguineus Familia Ixodidae
pueden sobrevivir por 1, y 19 meses, respectiva­
(4-9 días) mente. Seis géneros son los que tienen más importancia
Las caract�rísticas propias del ciclo de las garra­ médica: Dermacentor, Amblyomma, Rhipicephalus,
patas les permiten diseminarse rápidamente a nue­ Haemaphysalis, Boophilus e Ixodes los cuales se
vas áreas. En Chile, hasta 1974 no se había descrito distribuyen en casi todo el mundo. Tienen gran
la presencia de la garrapata café del perro, el R. importancia médica y veterinaria. En América La,,
sanguineus (Figura 55-3) pero en ese año se encon­ tina se describen, entre otras, las siguientes espe­
tró un perro intensamente parasitado en la comuna cies: Ambliomma cajennense, A. brasiliense, A.
Figura 55-2. Ciclo evolutivo de una garrapaia de tres huéspedes (Rhipicepha/11s sangui11e11s). de La Granja, de la Región Metropolitana. Debido maculatum, A. tigrinum. Todas ellas pican al hom­
a su alto potencial biótico y a la existencia de con­ bre y a otras especies de vertebrados. Entre las ga­
diciones ecológicas muy apropiadas para su desa­ rrapatas de animales, se mencionan: Haemaphysa/is
nan al huésped para mudar y transformarse en adul­ El ciclo de vida de las Argasidae se diferencia de rrollo, logró diseminarse masivamente al resto de kohlsi, Ixodes aurilu/us y el R. sa11gui11eus que trans­
tos, los que deben buscar un nuevo huésped para las Ixodidae en varios aspectos. Las larvas de algu­ las comunas de la región y a otras localidades del mite a los perros Dirofi/aria immitis, Babesia canis
alimentarse. nas especies no son móviles ni parasíticas, pero hay norte y sur del país. Además, su alta capacidad de (piroplasrnosis o babesiosis del perro), Hepatozoon
Las especies que desarrollan su ciclo en tres otras que requieren succionar sangre. Estas, para ayuno le permite mantener las localidades infesta­ canis (hepatozoonosis), Ehrlichia canis (ehrlichio­
animales se denominan garrapatas de tres huéspe­ convertirse en ninfas, tienen que sufrir varias mudas das por mucho tiempo, aun en ausencia de anima­ sis) y al hombreRic/cellsia conorii (fiebre botonosa)
des. En éstas, tanto las larvas como las ninfas, des­ (2 a 6), antes de las cuales deben alimentarse. Las les. Rickellsia rickellsi (fiebre de las montañas rocosas)
pués de alimentarse se dejan caer al suelo para mudar, ninfas fmalmente mudan para convertirse en adultos Algunas garrapatas son muy específicas de sus entre otras infecciones. Una especie de importancia
de modo que las garrapatas en este último estado, sexualmente diferenciados, los cuales se aparean huéspedes. El B. an11ulatus parasita fundamental­ veterinaria es B. microplus, garrapata del vacuno,
después de la muda, deben encontrar un segundo fuera del huésped antes de que la hembra comience mente al ganado bovino, pero otras especies pueden que transmite en la Argentina los hematozoarios
huésped y las adultas un tercero (Figura 55-2). una serie de comidas, después de cada una de las infectar a numerosas especies. Así, por ejemplo, el Babesia argentina, B. bigemina y Anaplasma mar­
Las garrapatas de un solo huésped, como por cuales. pone pequeñas cantidades de huevos: Las R. sanguineus a pesar de ser bastante específico de gina/e. En Chile se han descrito, además de Am­
ejemplo el B. annulatus, transmiten agentes patóge­ Argasidae parasitan a sus huéspedes solamente du­ los perros, puede en cualquiera de sus estadios ata­ blyomma tigrimun, de perros y zorros, A. parvi­
nos sólo en forma transovárica; o sea, a través de la rante los cortos períodos en que se alimentan, los car a otras especies animales e incluso al hombre. tarsum, de los camélidos de la zona norte, A. testu­
siguiente generación nacida de los huevos deposi­ cuales pueden medirse más en minutos u horas que dinis, de las aves, Ixodes stilesis, del pequeño cier­
tados por una hembra infectada. En cambio, las de en días. Durante el resto del tiempo se esconden, Importancia médica y veterinaria vo llamado "pudú" y una nueva especie, bautizada
dos (por ejemplo, Rhipicephalus everts¡) y las de mudan o ponen sus huevos en sitios conveniente­ de las garrapatas por Kohls corno Jxodes taglei. Este mismo autor ha
tres (por ejemplo, Rlzipicephalus sanguineus) son mente ocultos. UnaArgasidae importante, cuya con­ descrito la Ixodes chilensis. En años recientes IJa__
capaces de transmitir, además, patógenos en forma ducta difiere de ésta, es Otobius megnini, la "garra­ · Sus picaduras producen ,lesiones mecánicas y, sido descrita una -niieva borreliosis humana trans�
transestadial. pata espinosa de la oreja". Las larvas y ninfas de esta además, pueden ocasionar parálisis. Son también mitida por garrapatas, la llamada Enfermedad de
CJ
T
494 PARASITOLOGIA MEDICA GARRAPATAS 495

TABLA 55-1 para mudar y dar origen a las ninfas octápodas. Los Tr�amiento
INFECCIONES TRANSMITIDAS POR GARRAPATAS adultos se alimentan picando a las aves y, a veces, al
An\s de extraer las garrapatas, se aconseja co­
hombre. En la vivienda humana pueden encontrarse
!11Jección en dependencias vecinas a los gallineros. En Chile se locar sohl'e ellas algunas gotas de fenal alcanforado
Agente etiológico Vector
ha encontrado al interior de la provincia de o de piretrina 10,6%, disueltas en benzoato de metilo.
Rickettsiosis Antofagasta, en la zona de Calama, una nueva especie Así se facilita su desprendimiento. Se dejan pasar
unos 20 minutos y se procede a retirarlas, usando
- Fiebre maculosa o manchada de
i de Argos, que Kohls y Hoogtraal bautizaron con el
Rickettsia ricketsii A111blyo111111a spp., Dermacentor spp. pinzas y evitando la ruptura del capítulo o del hi­
las Montañas Rocallosas (USA)
nombre de A. neghmei. Ambas especies pueden ata­
:1 frades denlatus, Ornithodorus spp., postoma. Para el prurito, se suelen administrar me­
car al hombre y producirle nódulos eritematosos con
Rhipicephalus sangui11e11s un punto hemorrágico central en el sitio de la picadu­ dicamentos antihistamínicos y, en los casos de in­
- Fiebre botonosa y fiebre por R. conorii A111blyo111111a hebraeum, ra. Estas lesiones son pruriginosas y suelen servir de fección, se puede recurrir a quirnioterápicos o anti­
¡:
garrapatas africanas Rhipicephalus spp. puerta de entrada a infecciones bacterianas secunda­ bióticos.
:: ;
,,. - Tifus ruso o sibérico por ga�pata R. siberica Dermacentor nutalli
rias.
Control de las garrapatas
- Fiebre Q Dermacentor spp., A111blyo111111a
il1i
R. burneti Otobi11s 111eg11i11i. Existe en Argentina y Chile.
americanun, lxodes spp., etc. Solamente las ninfas atacan al ganado vacuno y Los argásidos se eliminan aplicando insecticidas
,1:: Virosis
equino, aunque también se ha encontrado en cerdos, de efecto residual, corno el gamexano o los
:1 1'i ovejas y perros. Comúnmente se la conoce como organofosforados, en los lugares en donde se refu­
i,,:¡; - Fiebre por garrapatas de Colorado
- Fiebres hemorrágicas
Virus Dermacentor ani:lersoni garrapata de las orejas, porque se localiza en con­
ducto auditivo externo (otocariasis). La sintomatolo­
gian. Los rociamientos deben repetirse cada dos o
Hya/0111111a spp., Dermacentor pictus
tres meses para asegurar la erradicación.
gía es variable y puede ser tanto subclínica, como Se aconseja a las personas que deben caminar
- Encefalomielitis ovina Grupo B del Toga vints lxodes ricinus, Rhipicephalus spp. provocar intensas molestias que llegan a perturbar la por lugares plagados de garrapatas emplear vestidos
(o "Iooping ill") producción de leche en los vacunos. Los caballos y medias gruesas, botas altas y, al regresar a sus
- Otras virosis (virus Powassan, Togavirus del grupo B Haemaphysa/is spinigera, Dermacentor manifiestan inquietud y mueven continuamente la casa, revisar las ropas y el cuerpo para destruir los
encefalitis rusa de primavera Flavivirus andersoni, frades spp. cabeza, lo que en ocasiones, se interpreta como un acarinos que puedan encontrarse en ellos.
y verano, etc.) síntoma de encefalitis o de otros trastornos nervio­
sos. El examen de los conductos auditivos externos
Ba�teriáceas permite ubicar las ninfas, extraerlas y aliviar a los BIBLIOGRAFIA
- Tularemia A111blyo111111a spp., Der111ace11tor spp.,
animales. Excepcionalmente, se han descrito algu­
Pasteurella
nos casos de parasitismo humano. Acha PN, Szyfres B. Zoonosis y enfermedades transmisi­
lwdes spp., Rlzipicephalus sang11i11e11s bles comunes al hombre y a los animales. zch ed. OPS.
Espiroquetosis
Omitlwdoms. Este género comprende varias es­ WashingtonD C: Publicación Científica N" 503, 1986.
pecies, algunas de las cuales son importantes por su Alcaíno H. Antecedentes sobre la garrapata café del perta
- Fiebre recurrente Borrelia Ornithodorus spp., papel en la transmisión, tanto al hombre como a los (Rhipicepha/11s sanguineus). Monog Med Vet 1985;
Rhipicepha/us sanguineus animales, de fiebres recurrentes por las espiroquetas 7:48-55.
- Espiroquetosis aviaria del género B01re/ia. En América Latina, se han des­ Soulsby EJL. Helminths, Arthropods and protozoa of do­
mestícated animals. 71h ed. Londo�: Bailliere Tyndall,
B. anserinum Argas persicus
crito O. takaje, O. venezuelensis, O. rudis y la O.
Protozoosis rostratits. A esta última se le ha atribuido, en Brasil, 1982.
- Babesiosis (Piroplasmosis transmisión de una rickettsiosis, la fiebre rnaculosa, Wellcome Foundation. Control de garrapatas del ganado
vacuno. zd• ed. Clumbury Coffrell Press, Herts En­
Babesia microti Boophilus a11n11latus
:i o tristeza del vacuno) (en el hombre y
similar a la fiebre purpúrica de las montañas
rocallosas de los Estados Unidos de Norteamérica. gland, 1970.
R. appe11dic11/at11s
animales domésticos) Sin embargo, el principal vector esA. cajenense.

Lyme. Su vector en Norteamérica es Jxodes dammini, Son ectoparásitos de las aves y, con menor frecuen­
Es una infección zoonótica causada por Borrelia cia, de los mamíferos y del hombre. Carecen de
burgdo,feri. En casos humanos más severos, puede placa dorsal y no hay dimorfismo sexual. El capítu­
provocar cuadros de encefalomielitis de gran inten­ lo se halla ubicado en la región anteroventral, por
sidad, llegando hasta producir la muerte del pacien­ lo que no es visible por la cara dorsal de la garra­
te. En Chile se han diagnosticado algunos casos pata. Su actividad es nocturna. Se encuentran en
incluyendo uno mortal. todo el mundo. En América Latina, las especies
más comunes·son:
Familia Argasidae
Argas persic11s. Parásito de gallinas y palomas.
Desde el punto de vista inédico y veterinario Las ninfas hexápodas permanecen sobre el cuerpo
interesan los géneros Argas, Otobius y Ornithodorus. de los huéspedes cuatro a ocho días y se desprenden

1,
1.1
�capítulo 56 PARAS/TOLOGIA MEDICA ARACNIDOS Y OTROS ARTROPODOS PONZOÑOSOS 497

ARACNIDOS la relacionada con faenas agrícolas, durante las cua­


les se presentan el 70% de los casos. Por lo tanto, el
Y OTROS ARTROPODOS PONZOÑOSOS
latrodectismo constituye un riesgo laboral para los
obreros campesinos que trabajan en las zonas en las
que existe esta araña. Afecta más frecuentemente a
hombres (85%) que a mujeres (15%), principalmente
ISABEL NOEMiy ALEJANDRO VIOVY a aquellos entre la segunda y cuarta década de la
vida. Los aspectos biológicos, ecológicos y
epidemiológicos, .ya mencionados, explican el por­
qué este accidente tiene su mayor incidencia entre
Numerosas especies de artrópodos poseen vene­ posición ofensiva cuando es o se siente molestada, fines de la primavera y comienzos del otoño. El 95%
no capaz de producir patología en el hombre. Por su disponiendo sus quelíceros en posición de ataque. de los casos ocurre durante el dfa, especialmente
gravedad, deben destacarse las causadas por arácni­ Sólo se ha observado reacciones de hipersensibili­ entre las 1 O y las 19 horas. Excepcionalmente puede
dos, especialmente los de los órdenes Araneida y dad cutánea o respiratoria, en aquellos individuos afectar a niños o mujeres, verificarse en circunstan­
Scmpionida. A éstos se hará referencia en primer que permanentemente las manipulan. Figura 56-1. latrodectus mactans, hembra.
cias intra o peridomiciliarias y/o producirse durante
lugar, para luego abordar los cuadros de hipersensi­ Distinta situación se plantea frente a los acci­ la noche.
bilidad generados por algunos insectos himenóp­ dentes en donde las arañas del suborden Labidog­
teros. pequeñas "arañitas" casi transparentes, que se pig­
natha, están involucradas, pues su veneno es po­ mentan paulatinamente durante los ocho meses que Fisiopatología. La ponzoña de Latrodectus sp.
tencialmente capaz de comprometer la vida del pa­ permanecen dentro del capullo ovígero. Cumplido tiene diferentes componentes activos entre los que
ARAÑAS ciente. Los géneros más representativos de este destaca la alfalatroinsectotoxina, una potente neu­
este periodo, al inicio de la primavera, los nuevos
suborden son: Latrodectus, Loxosceles, Phoneutria ejemplares de L. mactans perforan la ooteca y emer­ rotoxina proteica de peso molecular 120.000 daltons,
Son artrópodos depredadores, no seres parasi­ y Lycosa. gen hacia el ambiente exterior, en donde luego de un cuya acción es inducir un aumento en la frecuencia
tarios, que atrapan vivas a sus· presas, ya sea en mes, mudan y se convierten en adultos. Durante el de potenciales postsinápticos a nivel del. sistema
fonna directa o con ·1a ayuda de telas que ellas Latrodectismo proceso de desarrollo y maduración de estas arañas nervioso autónomo, principalmente el simpático,
mismas tejen y ubican en detenninados sitios. Una actuando comp un poderoso activador de la libera­
vez capturada su víctima, la inmovilizan mediante la se produce canibalismo, seleccionándose las mejor
Es el cuadro clínico consecutivo al envenena­ dotadas fisii:amente. El macho, después de haber ción de neurotransmisores en la placa motora, sinap­
inoculación de veneno producido por glándulas miento producido por la mordedura de arañas del sis neuronal y terminaciones de los centros neuro­
ublcadas en el cefalotórax. El aparato de inocula­ género Lah·odectus. De distribución cosmopolita, se fecundado a la hembra, sobrevive un tiempo relati­
vamente corto; sin embargo, la creencia popular de vegetativos. Aunque con menor intensidad, su ac­
ción está compuesto por un par de quelíceros, cada describen cinco especies constitutivas de este géne- que la hembra, una vez consumado el apareamiento, ción también afectaría el sistema nervioso central.
uno de los cuales articula un diente inoculador en . ro. En América Latina la más común es L. mactans, Experimentalmente, se ha logrado determinar que
su extremo distal. mata y devora a su pareja no ha sido totalmente
conocida comúnmente como: "araña del trigo", "ara­ confirmada. esta proteína requiere la presencia de Mg+ y Ca+
Tienden a vivir solas, aisladas de otros ejempla­ ña naranja", "capulina", "araña del trasero colorado" Las Latrodectus sp. se alimentan de insectos, para actuar, en tanto que su efecto es abolido por la
res de su misma especie, defendiendo celosamente y "viuda negra". preferentemente ortópteros y coleópteros, los que concavalina A. La liberación de neurotransmisores
su espacio vital y refugios. captura en forma indirecta a través de telas que ubica ocurre sólo a temperaturas superiores a 22 ºC y acon­
Se les clasifica en dos subórdenes: Biología. La hembra adulta de L. mactans mide "estratégicamente" y en forma directa, aprisionando tece en alrededor de dos minutos.
- Orthognatha: los quelíceros protruyen vertical­ entre 1,5 y 3 cm de largo, pudiendo llegar a 4,2 cm con
mente; por lo tanto, al morder, se clavan en forma las patas extendidas. Su abdomen es globuloso, de a su presa mediante un líquido filante y pegajoso que
libera desde el extremo posterior de su abdomen. Sintomatología. La mordedura de L. mactans en
perpendicular sobre la presa. color negro aterciopelado, tiene manchas de color Una vez capturada la víctima, procede a morderla e el ser humano implica la penetración de los quelíceros
- Labidognatha: los quelíceros emergen en posi­ rojo o rojoanaranjado en su extremo posterior, tanto en la superficie cutánea, al suceder esto se contrae
ción horizontal, por este motivo, al morder, se por su cara dorsal como ventral. El macho adulto es inyectarle su ponzoña paralizante.
Es una araña esencialmente rural. Su biotopo la musculatura del cefalotórax y la capa muscular
entrecruzan como una pinza al cerrar. significativamente más pequeño que la hembra y sus está constituido preferentemente por campos de intrínseca de las glándulas secretoras de veneno. La
manchas abdominales, al igual que las de los ejem­ cultivo de trigo, alfalfa, lino y diversas especies cantidad de ponzoña inyectada, además de la sus­
Importancia médica plares inmaduros, son de un color más pálido, ten­ ceptibilidad del individuo mordido, determinará di­
vegetales. Se la encuentra también en troncos de
diendo al amarillo (Figura 56-1 ). árboles, rocas y piedras de áreas silvestres y áridas. rectamente la severidad del cuadro clínico, el cual se
Si bien todas la arañas poseen veneno, desde el A fines de la estación estival, una vez producida En ocasiones, puede ser encontrada en jardin�s, caracteriza por el predominio de los síntomas y sig­
punto de vista médico, sólo algunas especies son la fecundación, la hembra inicia la postura de huevos letrinas, bodegas de forraje y otras dependencias nos generales por sobre los locales.
relevantes como agentes de daño. que, en número de cien a quinientos (promedio cien­ peridomiciliarias. En Chile se la ha encontrado en La mayoría de las veces el cuadro comienza con
:1 En general, el veneno de las grandes arañas te­ to ochenta), deposita y encierra en el interior de una todas las regiones. sensación de lancetazo urente en la zona de la mor­
rrestres (suborden Orthognatha, familia Mygalidae) ooteca, llamada capullo o saco ovígero. Este recep­ dedura, no observándose mayor rea,cción inflama­
es inofensivo para el hombre. Popularmente se las táculo es tejido previamente por la hembra con un
denomina "arañas peludas" (Chile, Argentina), Epidemiología. Como la mayoría de las arañas, L. toria local, aunque en algunos casos se observa
material muy similar al de la tela, pero de estructura mactans no es espontáneamente agresiva al e11fren­ una pequeña mancha rojiza, sobre la cual puede
"caranguejeiras" (Brasil) o "arañas pollitos" (región más compacta e impermeable; es esférico de aproxi­ verse dos puntos equimóticos, señal de la penetra­
amazónica). Su hábitat es extradomicilario y vive en madamente l cm de diámetro y su color es blanque­ tarse a vertebrados mayores. Esto implica que, cuan­
do muerde aI hombre, es sólo por un acto de extrema ción de los quelíceros. A continuación, se suele
nidos que construye en los árboles o madrigueras cino o café claro. presentar hipoestesia de la_ piel inj��ada, rodead_ a
que fabrica en la tierra. . ... : ;_ .. defensa, como por ejemplo, al ser oprimida acciden­
Los huevos, que miden alrededor .de: l mm de talmente céiritra la piel, situación que puede aconte­ por un sector de hiperestesia. Los sitios del �uerpo
Su cuerpo está cubierto por vellos. Adquiere una diámetró, dan origen, al cabo de tres semanas, a más frecuentemente afectados son las extremidades
cer en variadas circunstancias, siendo la más común
49 8 PARASITOLOGf,I MEDfCA ARACNIDOS Y OTROS ARTROPODOS PONZOROSOS 499

inferiores (50%) y superiores (35%), seguidas por el Cuando ha sido posible realizar estudio anatomo­ prolongado efecto residual en el ambiente y toxici­
cuello, tórax y abdomen. patológico de pacientes fallecidos, se ha constatado dad acumulativa en los vertebrados.
Luego de un corto período de latencia (25-45 edema pulmonar, hiperemia meníngea, hepática y Físico: Se han obtenído buenos resultados a
minutos), el 80% de los pacientes refiere un fuerte renal, además de dilatación de ciertas vísceras hue­ través de la quema controlada de los rastrojos en los
dolor que, a partir de la mordedura, se irradia a todo cas como intestino y vejiga. Cabe mencionar que en campos.
el resto del cuerpo. Se asocia a esta sintomatología, la zona de la mordedura no se observan lesiones Biológico: Las avispas y otros himenópteros
contractura muscular y temblor intermitente gene­ histopatológicas de importancia. colocan sus huevos dentro de los capullos ovígeros
ralizado, lo cual dificulta seriamente la bipedestación del arácnido. Posteriormente al desarrollarse los es­
y deambulación. En diversas ocasiones, la notable Diagnóstico. Es fundamentalmente clínico. Un tadios larvales del insecto, éstos se alimentan de los
rigidez abdominal, que ·ocurre entre el 20 y el 70% paciente con el antecedente anamnéstico de una huevos de Latrodectus sp. Otros enemigos natura­
de los casos, puede simular un abdomen en tabla, mordedura de artrópodo ocurrida al aire libre, con les de estas arañas son los pájaros y batracios que,
que unido a la hipertermia, las náuseas y los vómi­ sintomatología dolorosa, secretoria y espasmódica, sin exterminarlas, contribuyen a disminuir su núme­
tos, habitualmente presentes, ha hecho plantear el con marcada excitación psicomotora, diaforesis, ro.
cuadro de abdomen agudo, con la consiguente indi­ hipertensión arterial e hipertonía muscular orienta Educación en salud comunitaria: Estas activi­
cación quirúrgica. fuertemente el diagnóstico. dades deben estar orientadas a crear conciencia en
Posteriormente, aparece un marcado y caracte­ El diagnóstico diferencial se debe hacer princi­ la población acerca de los peligros de la mordedura
rístico aumento de las secreciones, especialmente palmente con cuadros de abdomen agudo (úlcera por Latrodectus sp., con el fin de facilitar medidas
sudoral, salivar, lagrimal y nasal. Concomitante­ gastroduodenal perforada, apendicitis, peritonitis e concretas para su control y prevención: evitar tran­
mente, se producen espasmos de la musculatura lisa, invaginación intestinal). sitar o recostarse en terrenos en donde se sepa o se
que afectan al aparato gastrointestinal, respiratorio y sospeche de la existencia de estos arácnidos, usar Figura 56-2. Laxasce/es /aeta, hembra.
genitourinario, lo cual se manifiesta clínicamente Tratamiento. En general, con la aplicación del ropa y calzado de protección adecuados al realizar
como dolor tipo cólico abdominal, dificultad respi­ siguiente esquema terapéutico, los pacientes están faenas agrícolas e insistir en la consulta médica pre­ sirve de refugio durante el día y hacia donde arras­
ratoria y micción involuntaria. prácticamente libres de síntomas en las veinticuatro coz una vez ocurrido el accidente. tra a las presas que captura. En la noche abandona
También es posible que acontezca retención a cuarenta y ocho horas posteriores a la consulta: la tela y sale de caza, caminando tímidamente por
urinaria por contractura involuntaria del esfinter Medidas generales y de sostén: Comprende la Loxoscelismo las paredes, en constante búsqueda de moscas y de
vesical. Priaprismo se presenta en el 13,5% de los rehidratación y la restauración del balance hidro­ otros insectos que reposan a esas horas. Si durante
varones afectados, siendo más acentuado en niños. electrolítico. También se considera útil el uso de Existen en diversas regiones del mundo arañas su recorrido la sorprende la aurora o es encendida
En el aparato cardiovascular los trastornos más analgésicos, sedantes y relajantes musculares. del género Loxosceles. En América Latina la especie la luz artificial, huye hacia la sombra y se esconde
frecuentes son taquiarritmias e hipertensión arterial Medidas específicas: El suero antilatrodectus más frecuente es L. /aeta. Le siguen en importancia en las prendas de ropa que están colgadas en la
transitoria, en a lo menos el 50% de los casos. En puede ser útil si se le emplea precozmente, es decir, L. reclusa y L. nifescens, presentes en México, Co­ pared. Por su ubicación intradomiciliaria, L. /aeta
ocasiones, el paciente refiere sensación de opresión antes de las primeras diez horas que siguen al acci­ lombia,Perú, Paraguay y Brasil. También se ha infor­ está protegida de las variaciones estacionales de
precordial que puede hacer pensar en un cuadro de dente. Pasado este período no tendría indicación, mado de envenamientos por L. rufipes, L. spadicea, temperatura y se mantiene activa durante todo el
isquemia aguda al miocardio. pues el veneno ya se ha fijado totalmente a los L. gaucho, L. arizonica y L. unicolor. Todas estas año, aunque de preferencia los accidentes ocurri­
A nivel del sistema nervioso periférico existe tejidos blanco. Su empleo se halla en plena reeva­ especies tienen un veneno de potente efecto pató­ rían durante el verano. En Chile se le encuentra
alteración en la sensibilidad e hiperreflexia. luación. geno para el hombre. entre la primera y la décima región.
Los hallazgos en los exámenes de laboratorio Buenos resultados se han obtenido con el uso de Se reproduce por huevos que la hembra depo­
son inespecíficos. El hemograma muestra poliglo­ neostigmina, un inhibidor de la colinesterasa que Bioiogía.Loxosce/es /aeta mide aproximadamen­ sita, en número de doscientos o más, en una ooteca
bulia por hemoconcentración, la uremia suele estar antagoniza el efecto tóxico del veneno de Latrodectus te un centímetro de longitud. Es café pardusca, y el tejida con su seda. Este receptáculo es redondeado
elevada y el examen de orina puede evidenciar au­ sp. Si el cuadro clínico es moderado a severo, se cefalotórax es más claro que el abdomen. Está cu­ y se ubica en la vecindad de la tela. Las arañas que
mento en la densidad, albuminuria y cilindruria. administra en forma parenteral hasta la remisión de bierta por una pilosidad corta y abundante. El nacen primero ingieren a las restantes. Después de
Habitualmente, la fase más intensa de la enfer­ los síntomas agudos, en tanto que se utiliza la vía cefalotórax es piriforme, como el cuerpo de un vio­ algunas semanas salen de la ooteca y se dispersan
medad evoluciona en el lapso de cinco a siete días. oral durante dos o tres días, si las manifestaciones lín. En su extremo anterior existen tres pares de ojos por las proximidades, donde establecen nuevos ni­
Posteriormente tiende a desaparecer en forma gra­ son leves. (Véase el Capítulo 66: Tratomiento de simples en una disposición que caracteriza al géne­ dos. Cada ejemplar vive solo y hasta llegar a adul­
dual. Durante la fase de resolución, que puede durar las parasitosis y tablas terapéuticas). ro Loxosceles: dos pares laterales y uno anterior, tos fértiles, dura entre nueve meses a un año. L.
1 hasta un mes, los pacientes refieren astenia, adina­ Existen algunas experiencias que recomiendan formando un triángulo. Las hembras son más volu­ /aeta no es espontáneamente agresiva para el hom­
·1 mia e insomnio. Ocasionalmente, en esta etapa se bre, sólo muerde en defensa propia, cuando se
1
el uso de gluconato de calcio al l 0%, endovenoso y minosas y fuertes que los machos, los cuales, ade­
l
1
alternan exacerbaciones periódicas similares al cua­
dro clínico inicial, aunque menos intensas.
lento. más, se diferencian por una expansión sacciforme
que presentan en el segmento distal de los pedi­
siente molestada o es comprimida sobre la piel des­
cubierta.
En general, se trata de un cuadro grave, cuya Prevención. Control de Latrodectus 111acta11s: palpos, que corresponde al receptáculo seminal o
letalidad puede alcanzar hasta el 4%. Los indivi­ Químico: El insecticida organoclorinado lindano espermático (Figura 56-2). Epidemiología. A diferencia del latrodectismo,
duos que presentan alguna patología crónica pre­ o gamexano es tóxico para este artrópodo. Se ha . L. /aeta es una araña solitaria, vive y caza ais­ el loxóscelismo es un accidente que ocurre habi­
existente (cardiopatía hipertensiva, insuficiencia aplicado mediante rociamiento aéreo sobre los cam­ lada de sus congéneres. Su hábitat es intradomi­ tualmente dentro de la vivienda (87% de los casos),
renal, limitación crónica al flujo aéreo, diabetes pos de cultivos densamente infestados. El resultado ciliarió, especialmente en rincones altos y sombríos durante la noche, mientras se duerme o al vestirse
mellitus) y aquellos en.ed¡(�es extremas.{niños y ha sido satisfactorio en cuanto a prevenir el latro­ de las habitaciones, detrás de cuadros y muebles, en la mañana. La ubicación de las camas estrecha­
ancianos) tienen un mayor riesgo vital por- latro­ dectismo; sin embargo, su uso no está exento de en bodegas;-entretechos y.roperos. En estos luga­ mente colindantes a las murallas o el hábito de
dectismo. accidentes y riesgos para el hombre debido a su res teje una tela laxa, algodonosa y sucia, que le colgar la ropa en las paredes son factores que con-
500 PARASITOLOGIA MEDICA ARACNIDOS Y OTROS ARTROPODOS PONZOÑOSOS 501

tribuyen a la ocurrencia de este accidente. También raro). Cuando se produce el loxoscelismo cutáneo producirse melena por edema y hemorragia de la Es importante observar el curso clínico del cua­
la localización intradomiciliaria de la araña explica necrótico aparece, en el curso de las primeras vein­ mucosa intestinal. dro en las primeras cuarenta ocho horas para pre­
que el cuadro afecte de preferencia a mujeres (53 % ticuatro o cuarenta y ocho horas, una placa violácea Los exámenes de laboratorio demuestran la exis­ cisar si se trata de un cuadro cutáneo puro o de un
de los casos) y niñ!JS, Aunque su mayor frecuencia con zonas isquémicas pálidas y áreas hemorrágicas, tencia de anemia hemolítica, leucocitosis con pla­ cutáneo visceral. La existencia de hemólisis, icteri­
es en verano, también acontece en pleno invierno. llamada placa livedoide, de extensión y profundi­ quetas normales o disminuidas. La protrombinemia cia, fiebre alta y orinas obscuras orientan a un pro­
dad variables, alrededor o sobre la cual puede haber se encuentra baja y el TTPK aumentado. La ceso sistémico.
Fisiopatología. El veneno es una proteína. Sus vesículas o bulas de contenido seroso o hemorrágico, hiperbilirrubinemia es a expensas de ambas fraccio­ En Estados Unidos se ha intentado obtener
componentes principales son dos polipéptidos de y que se rodea por un halo de intenso edema y nes, pero predomina la indirecta por daño hepato­ métodos auxiliares de laboratorio mediante la
34.000 daltons de peso molecular. Su efecto es eritema. Esta noxa es muy dolorosa y se localiza celular. Las transaminasas glutámico-pirávicas pue­ hemaglutinación pasiva y la transformación blástica
cutaneonecrosante, hemolítico, vasculítico y coagu­ sobre una base indurada por el infiltrado inflamato­ den elevarse. En la orina se halla hematuria, hemo­ de los linfocitos. Con el uso de estas técnicas, se ha
lante. El cuadro clínico estaría determinado por la rio existente. Con el paso de los días, esta placa globinuria y albuminuria. Cuando se produce insu­ podido detectar la presencia de la ponzoña hasta
extensión y la profundidad de la lesión, la cantidad evoluciona hacia la gangrena seca, se obscurece y ficiencia renal, puede haber hipertensión arterial e cinco días después de la inoculación experimental
de veneno inyectado y la susceptibilidad individual. delimita (Lámina 36). Posteriormente, se atenúa el hiperuricemia. La destrucción celular masiva con­ en animales de laboratorio. Recientemente se han
El levarterenol, la esfingomielina y la hialuronidasa dolor hasta desaparecer, se reduce el eritema circun­ duce a elevación del potasio sérico, lo que explica­ comunicado resultados exitosos, empleando la téc­
presentes en la ponzoña, favorecen su rápida dise­ dante y termina por-desprenderse por esfacelo o des­ ría los trastornos en la conducción cardíaca que nica del ensayo inmunoenzimático en homoge­
minación, lo que explicaría el corto tiempo que camación, en un período de quince días o más. Si la aparecen en los casos severos. nizados de tejidos humano mordidos por Loxosceles
media entre la inoculación del veneno y el inicio del placa gangrenosa se descama lentamente, sólo que­ Es de extraordinario valor controlar la evolu­ gaucho en Brasil, permitiendo certificar el diagnós­
cuadro clínico. Los síntomas serían manifestacio­ da una zona despigmentada; pero si cae in tolo por ción de cualquier tipo de loxoscelismo, durante las tico.
nes del daño inmediato, producto de la acción cito­ esfacelo, se produce una úlcera de extensión y pro­ primeras veinticuatro o cuarenta y ocho horas, y El diagnóstico diferencial debe establecerse con
tóxica y proteolítica que alteraría los endotelios fundidad variables, la que cicatriza tórpidamente y estar atento a la posible aparición de los signos otros cuadros inflamatorios o necróticos de la piel,
vasculares. puede provocar secuelas queloideas, retráctiles o predominantes existentes en el compromiso visce­ como erisipela necrótica, enfermedad de Lyme,
En la zona de la piel accidentada, la mordedura deformantes. ral: fiebre alta, anemia, ictericia, hematuria y afec­ carbunclo, infecciones por Staphylococcus aureus,
provoca severas alteraciones vasculares, con áreas En el loxoscelismo cutáneo edematoso, como su ción sensorial. Streplococcus piogenes, Pseudomonas aeruginosa,
de vasoconstricción y otras de hemorragia, que con­ nombre lo indica, predomina este último fenómeno. No hay relación entre el tamaño, la ubicación o virus de la Familia Herpes, necrosis química provo­
ducen a la brevedad a una isquemia local y a la Destaca un edema gigantesco que aparece en la la forma del daño cutáneo y la aparición y/o mag­ cada por ácidos, álcalis o por la extravasación de
constitución de una placa gangrenosa. zona de la mordedura, con menor componente de nitud del compromiso visceral; es así como lesiones sustancias lesionantes de los tejidos (gluconato de
lJna vez que el veneno se difunde a distancia o necrosis y eritema. Estos casos, si bien parecen es­ cutáneas mínimas pueden dar cuadros viscerales sodio y calcio). Específicamente, el compromiso
por inoculación directa en los vasos sanguíneos, se pectaculares, son los de mejor pronóstico. muy graves e incluso mortales. Es posible que esta visceral debe diferenciarse de otras etiologías que
producen lesiones vasculares hemorrágicas y ede­ En ambos tipos de loxoscelismo cutáneo, las evolución se deba al paso de la ponzoña en forma producen síndromes hemolíticos sistémicos.
matosas en riñón, hígado, cerebro y tubo digestivo. características clínicas predominantes son las loca­ ¡lirecta al espacio intravascular, al momento de ser
Por el poder hemolítico del veneno se produce des­ les, en la zona· de la mordedura. Los síntomas gene­ inoculada, como parece evidenciarse en algunos Tratamiento. El uso de suero antiloxosceles que.
trucción de glóbulos rojos. Esta acción se cree ocu­ rales son de escasa importancia. Puede existir fe­ estudios experimentales. actúa neutralizando la toxina libre debería ser el
rre por sustancias tóxicas derivadas de la alteración brículas, malestar general y angustia. La orina es tratamiento de elección. Sin embargo, en la prácticá
celular o tisular, fenómenos anafilactoideos, forma­ clara y de volumen normal. Los exámenes de labo­ Diagnóstico. El diagnóstico de loxoscelismo en su uso tiene importantes limitaciones: el suero debe
ción de inmunocomplejos y activación de la vía ratorio no están alterados. Es poco frecuente que la cualquiera de sus formas, es esencialmente clínico ser empleado lo más precoz posible, hasta cuatro
clásica del complemento. lesión necrótica sufra infección secundaria y, habi­ y se basa en las características de la lesión y en su horas posteriores al accidente, ya que la acción del
Es posible que exista en algunas personas pre­ tualmente, no hay aumento de los ganglios linfáti­ progresión. De este modo, el predominio de la veneno es tan rápida que una vez establecido el
disposición para desarrollar hemólisis por deficien­ cos regionales. sígnología local, con escasa repercusión general, daño, la evolución posterior de las lesiones es el
cia de la enzima glucosa 6-fosfato deshidrogenasa b. Loxoscelismo cutáneo-visceral (Lámina 37). permite orientarse a cuadros cutáneos puros; en tan­ simple progreso de las secuelas. La dosis recomen­
(G6PP) del glóbulo rojo. Es menos frecuente (15,7% del total de casos). Es un to que la existencia precoz de un violento síndrome dada es una o dos ampollas del suero en inyección
cuadro grave y de curso fatal si no se trata en forma hemolítico, denuncia el cuadro visceral. Ayuda el im. Su administración implica los riesgos de la
Sintomatología. El loxoscelismo se caracteriza urgente, requiere hospitalización inmediata. Tiene hecho que, con frecuencia, el paciente observa, cap­ sueroterapia heteróloga, por lo cual, en numerosas
por presentar una lesión en el sitio de la picadura, una letalidad de alrededor de un 25%. tura y destruye la araña luego de la mordedura. El publicaciones se cuestiona su empleo.
la cual puede acompañarse de compromiso sistémi­ Se inicia en forma semejante a los casos cutá­ examen de los restos del artrópodo, en especial la El uso de antihistamínicos en los casos cutáneos
co en caso de hemólisis masiva intravascular. Se­ neos puros, pero se suma aquí un fenómeno hemo­ típica disposición de los ojos, facilita su identifica­ puros es eficaz. Es conveniente iniciar la terapia
gún sea la evolución se clasifica en: lítico masivo, que evoluciona rápidainei:tte durante ción. con preparados inyectables, por su absorción más
a. Loxoscelismo cutáneo: Es el más frecuente las primeras veinticuatro a cuarenta y ocho horas de Como habitualmente el accidente ocurre duran­ rápida y segura, cambiándolos a la via oral tan
(84% de los casos). Se inicia con una sensación de ocurrido el accidente. Aparece fiebre alta y sosteni­ te la noche, cuando la persona duerme, o, en la pronto disminuya el edema y el dolor. Un buen
violento lancetazo urente en el sitio de la mordedu­ da, anemia violenta y progresiva, ictericia marcada mañana, al vestirse con la ropa donde se ha refugia­ control se consigue con el siguiente esquema:
ra o con un fuerte prurito que, en pocas horas, y orinas oscuras debido a la hematuria y la hemo­ do la araña, las lesiones cutáneas se producen de clorfenamina maleato (4 mg/kg/día) o dextroclorfe­
adquiere características de dolor intenso y progresi­ globinuria, que pueden llevar a la oliguria y anuria preferencia en la cara, en las regiones descubiertas niramina (0,15 mg/kg/día) por vía im, durante d� s
vo. por insuficiencia renal aguda, generada por la in­ del cuerpo o en las extremidades superiores. a tres días, continuando luego por vía oral, en dosis
.
La evolución posterior del proceso determina la tensa hemólisis intravascular. Los exámenes de laboratorio sólo se alteran de decrecientes hasta la delimitación de la necrosis y la
producción de dos tipos,di_ferentes de lesiones cutá­ El paciente se agrava rápidamente; aparece com­ modo marcado ·en los casos viscerales, indicando la desaparición del dolor y edema. .
neas: el· loxosce/ismo · cutiíneo necrótico (forma promiso sensorial progresivo, que puedé llegar a la existencia de.'ánemia hemolítica y daño renal se­ Recientemente se ha utilizado dapsona (4-4 d1a­
habitual) y el loxosce/ismo cutáneo edematoso (más inconciencia, al coma y a la muerte. Además, puede cundario. minodifenil sulfona) en pacientes adultos con ex-
502 PARASITOLOGJA MEDICA

tensas lesiones de la piel, lográndose revertir el com­ lares, productos tóxicos provocados por la hemólisis
T ARACN/DOS Y OTROS ARTROPODOS PONZOÑOSOS

la terapia antishock respectiva y brindar una adecua­


503

tamínicos y las medidas de sostén descritas en refe­


promiso cutáneo. Actúa inhibiendo la migración de e inmunocomplejos. De esta manera, se logra detener da atención de enfermería. rencia a los accidentes provocados por arañas. Los
los neutrófilos al sitio de la mordedura, mediante el mecanismo fisiopatológico precursor de todo el casos pediátricos deben ser atendidos en forma ur­
mecanismos aún no aclarados. La dosis recomenda­ proceso cutáneo-visceral. Tiene el inconveniente del Accidentes provocados por Lycosa sp. gente, pues· en éstos la evolución puede ser rápida­
da es 50 a 200 mg/día durante diez a veinticinco días. uso de hemoderivados. mente progresiva.
Su uso debe ser reservado para los casos graves de En América Latina la especie más frecuente­ Ultimamente, se ha descrito el uso del hidroclo­
loxoscelismo cutáneo, ya que como efecto secunda­ Control. Se fundamenta en el correcto aseo de mente causal de patología es Lycosa erithrognata, ruro de prazosin, un bloqueador alfa postsináptico,
rio se describe anemia hemolítica con metahemo­ las viviendas, dirigido a la eliminación de las telas y aunque también L. rapatoria, L. pampeana y L. especialmente útil en los accidentes provocados por
globinemia dosis dependiente, lo que ocurre prefe­ refugios de L. [aeta que están preferentemente de­ thorelli han sido vinculadas a este cuadro. Se les Bllllws tamu/11s, un escorpión de la India cuyo ve­ i
rentemente en pacientes con déficit de glucosa 6- trás de los cuadros y muebles o en los ángulos conoce corrientemente como tarántulas y provocan neno es capaz de provocar miocarditis en forma
fosfato deshidrogenasa, erupción cutánea y reac­ superiores de las habitaciones. Conviene también accidentes en general poco frecuentes y de poca directa. A las dosis utilizadas (125 µg en niños y
ción de hipersensibilidad, caracterizada por fiebre, cerrar los orificios de pasada de las cañerlas y los magnitud. La lesión es fundamentalmente local y se 500 µg en adultos), la función cardiovascular se
cefaleas, náuseas, linfadenopatías, hepatitis, conductos eléctricos, que bajan del entretecho, para presenta como una pequeña zona necrótica que afecta normaliza pocas horas tras su administración, me­
leucopenia y síndrome mononucléosico. Está con­ impedir que por allí penetren al interior del hogar. El sólo la epidermis, semejante a una quemadura de jorando significativamente el pronóstico.
traindicado en embarazo, anemia, ancianos y alérgi­ uso de aracnicidas sólo es útil y recomendable cuan­ primer grado. El dolor y el prurito son de moderada La letalidad del escorpionismo varía entre 0,8 y
cos a las sulfas. do se procede con una buena técnica, depositándo­ intensidad y desaparecen rápidamente. La lesión 5%, dependiendo de la especie del agente ponzoño­
El tratamiento local, con aseo de las lesiones y los en la superficie y en las áreas donde están los descama, sin complicaciones, salvo que se agregue so y de las características y condición general del
extracción de los fragmentos necróticos, es el de escondrijos. El empleo de insecticidas al aire, con una infección bacteriana. El empleo de antihista­ individuo picado. La cau�a de la muerte es, en la
cualquier úlcera cutánea. En caso de infección bombas domésticas de aspersión o aerosoles, no mínicos inyectables, orales o tópicos, resuelve fácil­ mayoría de los casos, parálisis respiratoria por com­
bacteriana agregada, se requiere antibioticoterapia produce buen resultado, además tiene el peligro de mente los casos. promiso bulbar.
por vía general y antisépticos locales. Si la lesión es brindar una falsa sensación de seguridad. Mucho
profunda o extensa (EB 2,5 cm de diámetro), debe más se consigue con una buena limpieza para obte­ ESCORPIONES INSECTOS PONZOÑOSOS
contemplarse injerto, con el objeto de Óbtener una ner un buen control de estas arañas en el hogar.
cicatrización adecuada. / La picadura por diferentes especies de escorpio­ Importancia médica
También se ha aplicado oxígeno hiperbárico di­ Envenenamiento nes produce un cuadro clínico de variable intensi­
rectiµnente en la lesión, procedimiento aparentemen­ provocado por Pho11e11tria sp. dad denominado escorpionismo. Las reacciones de alergia a picadura de insecto
te inocuo, pero aún no evaluado del todo. En América Latina las especies más temidas por (API) se conocen desde hace miles de años, prueba
En los casos cutáneo-viscerales, el tratamiento . Las especies principales de este género, pertene­ la patología que producen pertenecen al género de ello es que en jeroglíficos que datan del año 2621
implica la hospitalización del paciente y la terapia cientes a la familia Ctenidae, son Phoneutria 11igri­ Centruroides (alacranes): C. sujji,sus, C. noxius, C. a.C., ya se mencionan muertes por anafilaxia a pi­
antishockde urgencia, que incluye el manejo adecua­ venter y Phonentria Jera. Es una araña pequeña, limpidus y C. elegans en México y C. sc11/pt11tatus cadura de avispas ocurridas en ese periodo.
do de la hidratación, equilibrio hidrolectrolítico y errante, de hábitat predominantemente extradomi­ en EE.UU. (Arizona). En Brasil, destacan los del Recientemente ha surgido un creciente interés e
oxigenoterapia. Además de antihistarninicos, el trata­ ciliario, que abunda en las regiones cálidas de Brasil, género Tityus, especialmente T. ser111/atus y T. ba- información respecto a API, en relación a su pato­
miento se complementa con corticoides de acción Perú, Bolivia, Argentina y Ecuador. Por transporte hiensis. génesis, métodos dignósticos y tratamientos ade0
rápida, en dosis altas e inyectables al inicio de la pasivo puede llegar a otros países, por ejemplo, en Las manifestaciones clínicas locales son dolor, cuados. Se ha demostrado que cualquier individuo
terapia, para disminuir la dosificación y luego pasar a Estados Unidos es conocida como banana-spider, edema, eritema e infiltración subcutánea que puede puede ser potencialmente víctima de una reacción
la administración oral. A modo de ejemplo, se puede puesto que fue introducida a través de las importacio­ terminar en la configuración de una placa violácea, grave o fatal por API. Estos poseen una ponzoña
iniciar el tratamiento con dexametasona, vía nes de plátano. No tejen tela. Habitan alrededor de las la cual desaparece al cabo de cuatro a seis días. que puede desencadenar una reacción alérgica y/o
intramuscular o endovenosa, por dos o tres días o viviendas o en los rincones de garajes, bodegas y Simultáneamente puede agregarse síntomas ge­ tóxica en el hombre. Se trata de un accidente serio y
hasta la corrección de la hematuria y hemoglobinuria, otras dependencias semejantes. Son agresivas, no nerales como fiebre, prurito y fenómenos secretorios en ocasiones mortal, si no es tratado en forma co­
se continúa posteriormente con prednisona, disminu­ huyen al ser sorprendidas, e incluso, atacan saltando acentuados (rinorrea, epifora, sialorrea y diafore­ rrecta y oportuna. Por esta razón, es necesario estar
yendo la dosis paulatinamente cada dos días, hasta sobre su potencial víctima. Su ponzoña es neurotóxica. sis). En los casos severos se asocian espasmos actualizado de los avances en esta materia, ya que su
completar siete a diez días de tratamiento. La mordedura provoca dolor lancinante muy in­ musculares, convulsiones, disfagia, disartria, ede­ complicación constituye una emergencia médica. La
El empleo inicial de corticoides y antihistamí­ tenso, acompañado de sensación de quemadura. Dura ma glótico, hipersecreción bronquial y otros sínto­ mortalidad relacionada a API es baja, pero la
nicos por vía parenteral es fundamental, no sólo por seis a siete horas, no hay edema local ni lesión mas y signos similares a los del latrodectismo. morbilidad asociada a la reacción sistémica es con­
la urgencia y gravedad de la situación, sino porque cutánea evidente. Posteriormente aparece fiebre ele­ En algunas ocasiones la evolución es muy gra­ siderablemente mayor.
la administración oral es poco efectiva. Estudios en vada e hipersudoración. En los casos graves, se ve, cuando hay acción central neurotóxica del vene­
autopsia de pacientes fallecidos por esta causa, han agrega intenso compromiso del SNC, obnubilación, no, el cual actúa como un potente estimulador del Biología. Los insectos himenópteros, principal­
demostrado severa inflamación y edema de la muco­ diplopía, parálisis progresiva y asfixia. El cuadro tie­ sistema nervioso simpático. En este caso, por la mente abejas y avispas, poseen una ponzoña que
sa intestinal, lo que afecta la óptima absorción del ne una letalidad entre 1 a 3% en adultos y de 20 a 30% hipertensión arterial, el edema pulmonar agudo y la inoculan al picar al hombre. En la práctica, las que
fármaco ingerido. en los niños. falla circulatoria periférica, el paciente está en esta­ presentan mayor importancia por las reacciones que
En pacientes en coma profundo, hipotermia, he­ El tratamiento prioritario es el suero anticténico, do crítico y el accidente puede tener un desenlace desencadenan son:
mólisis intensa, hiperpotasemia e insuficiencia renal inyectado precozmente, porvía intramuscular o sub­ fatal eri pocas horas.
aguda, se ha obtenido resultados satisfactorios re­ cutánea, en dosis de 5 mL. Es necesario también, El tratamiento óptimo se.ria el suero antiescor­ Nombre ¡:01111ín Denominación científica
curriendo a la exanguinotriinsfusión, hemodiálisis, disminuir el dolor con analgésicos y administrar piónico, pero éste pierde utilidad-.al cabo de doce Abeja Apis me/lijera
peritoneodiálisis, plasmaféresis o transfusiones de soluciones de rehidratación. En los casos de cur­ horas de ocurrido el accidente. Según la gravedad Avispa Polistes sp.
'
¡ sangre. La exaguinotransfusión elimina restos celu- so grave, es imperativo hospitalizar para emplear del cuadro, será necesario la corticoterapia, antihis- Avispa chaqueta amarilla Vespula jlavopilosa

i
504 PARASITOLOGIA MEDICA ARACNIDOS Y OTROS ARTROPODOS PONZOÑOSOS 505

En general, habitan áreas rurales y suburbanas. niveles durante semanas e incluso meses y luego Diagnóstico. Generalmente se hace por la histo­ estimulación de la producción de detern1inados lin­
La mayoría de las avispas son agresivas per se; en disminuye gradualmente en un período de seis a ria clínica del paciente, no obstante, sólo una mi­ focitos supresores que inhiban selectivamente célu­
cambio, la abeja es más bien pacífica y no pica a doce meses. Sería capaz de bloquear o modular la noría .de los enfermos es capaz de identificar certe­ las y mediadores propios del fenómeno de hipersen­
menos que se le moleste. Otra particularidad de la respuesta de hipersensibilidad mediada por lgE. Se ramente al agente agresor. El examen más sensible sibilidad, lo que redundaría en una menor reactivi­
abeja es que tras el acto de picar, el aguijón se ha observado que los adultos expuestos a picaduras y específico para demostrar sensibilización a pica­ dad al alergeno por parte de las células blanco. l Í
desprende de su cuerpo quedando adherido al de su reiteradas por abejas (apicultores), suelen tener IgG dura de insectos es la intradermorreacción (IDR) al Previo a su aplicación, se debe estar seguro de que l 1
víctima. especifica elevada. Estos individuos inhiben en for­ veneno. Existen en el mercado preparados de pon­ la reacción alérgica es mediada por lgE y el alerge­
Las abejas viven en colmenas que ubican, prefe­ ma progresiva su reactividad frente a las picaduras, zoña de abejas y avispas aptos para su utilización no es conocido. Este procedimiento no cura la en­ '1
rentemente, en los árboles. Habitualmente, la pica­ adquiriendo de este modo una tolerancia o resisten­ diagnóstica. Esta prueba sólo está indicada en los fermedad y sólo protegería al individuo sensibiliza­
dura no se infecta. La ponzoña contiene fosfolipasa, cia fisiológica al ataque de estos artrópodos. pacientes con el antecedente de reacción alérgica do de una reacción grave o mortal. Es cara, larga y i1
hialuronidasa, histamina, lecitinasa, melitina, apa­
mina y fosfatasa ácida. Sintomatología. La API puede producir un cua­
sistémica. El 95% de los casos presenta una res­
puesta positiva. Además, se dispone de ensayos in
no está exenta de efectos secundarios. Estaría prin­
cipalmente indicada en individuos mayores de cin­
co años con API con reacción sistémica importante,
l
Las avispas viven en nidos fabricados en árbo­ dro clínico muy variado que va desde una lesión vi/ro como el test radio alergoabsorbente (RAST)
les, arbustos y basureros. Las lesiones provocadas mínima cutánea, hasta la muerte en pocos mínutos. que permite determinar los niveles séricos de IgE que no respondan a otras medidas de control y que
por la picadura se infectan fácilmente. El veneno Las manifestaciones más severas dependen de un específica frente a distintos venenos y la prueba de tengan IDR o RAST positiva, en estos casos, se ha
está constituido por antígeno 5, histamina, seroto­ mayor volumen de veneno inoculado, la pennanen­ liberación de histamina inducida por acción de una observado respuestas favorables en el 95% de los
nina, hialuronidasa y lecitinasa. Las avispas cha­ cia del aguijón en el punto de penetración y, espe­ ponzoña sobre basófilos de personas sensibilizadas. tratados. Habitualmente se recomienda l 00 µg de
queta amarilla construyen sus nidos en suelos, pa­ cialmente, la existencia de sensibilización previa. veneno cada cuatro a seis semanas, durante cuatro
redes y basureros. La ponzoña está compuesta por Las diversas reacciones que producen las pica­ Tratamiento. El tratamiento inmediato depen­ a cinco años. No está indicada en personas que
antígeno 5, histamina, quininas y serotonina. Es la duras de insectos se clasifican en tóxicas, alérgicas de de la magnitud del cuadro clínico, el cual se presenten antecedentes de sólo urticaria frente a
causante de los cuadros más graves. y retardadas: relaciona con el grado de hipersensibilidad del pa­ picaduras de insectos, alergias alimentarias (aun­
Reacción tóxica. Es provocada por picaduras ciente. Para definir la conducta a largo plazo se que sean mediadas por IgE), coexistencia con algu­
Epidemiología. Se ha estimado que alrededor múltiples. En este caso la ponzoña produce una debe analizar cada caso en particular y realizar na enfermedad autoinmune (lupus eritematoso sis­
del 8% de los individuos presenta API y que la intoxicación sistémica que se expresa clínicamente estudios complementarios como los señalados en el témico, artritis reumatoide, etc.), asma severa no
frecuencia de anafilaxia por esta causa sería del por trastornos gastrointestinales (vómitos, diarrea), párrafo precedente. controlada, ingestión reciente de agentes bloquea­
0,4% en la población general. El 60% de los afec­ hipotensión, cefalea, convulsiones, compromiso de Tratamiento de emergencia. Ante efectos loca­ dores beta-adrenérgicos y recidiva pese a la admi­
tados de API son varones, la mayoría campesinos. conciencia, coma y muerte. La picadura masiva y les o sistémicos leves y moderados, se debe proceder nistración previa de inmunoterapia.
El 60% son niños, predominando el grupo etáreo simultánea de quinientas o más abejas es frecuente­ a extraer el aguijón (presionando el extremo api­ La reacción adversa más importante es el desen­
COITespondiente a los escolares (47% del total de mente mortal. cal), aplicar hielo local, administrar antihistamínicos cadenamiento de un shock anafiláctico durante su
casos). La picadura ocurre especialmente durante el Reacción alérgica: y analgésicos, usar torniquete, indicar reposo, con­ aplicación, por lo que el personal que la realiza
día, en verano y en zonas rurales o suburbanas. Se - Local. Es leve cuando se manifiesta sólo por trolar los signos vitales, etc. En los casos sistémicos debe estar entrenado para resolver esta emergencia.
ha observado cierta predilección de estos artrópo­ dolor, prurito, eritema y edema en el sitio de la severos o de shock anafiláctico, el tratamiento es
dos por picar zonas tibias de la piel. picadura. No dura más de 24 horas. Es moderada más complejo y debiera hacerse idealmente en una Prevención
Estudios bien controlados han demostrado que cuando el edema y eritema es muy notorio y dura unidad de cuidados intensivos, con el fin de ofrecer
no existe una mayor predisposición a hacer una más de un día. las condiciones necesarias para el manejo adecuado · La educación sanitaria considera las siguientes
reacción anafiláctica por API en pacientes atópicos. - Sistémica. En la forma leve existe urticaria y de un shock de tipo distributivo. Los fármacos más recomendaciones para aquellos individuos que pre­
Producida la picadura, el organismo monta una res- · prurito generalizado, pudiendo llegar al edema an­ utilizados son epinefrina(subcutánea o endovenosa), sentan API:
puesta inmune en la cual se puede distinguir dos gioneurótico. Es moderada cuando se agregan sínto­ corticoides de acción rápida, antihistamínicos, ami­ - Eliminar los nidos de insectos, especialmente
i fases: mas y signos digestivos (dolor abdominal, náuseas, nas vasopresoras y broncodilatadores. de himenópteros, ubicables en el peridomicilio.
1
- Respuesta de hipersensibilidad. Está mediada vómitos, diarrea). Se clasifica como severa si cursa Tratamiento profiláctico. Considera la educa­ - Evitar acumulación de basuras.
,¡ - No desplazarse descalzo o con ropas de colo-
1
por lgE (e IgG 4) específica para el veneno de uno con confusión mental y compromiso del aparato res­ ción del paciente para evitar la exposición a nuevas
o más insectos. Esta última posibilidad se da por la piratorio (disnea, disfonía, estridor laríngeo, picaduras, aplicando medidas específicas de pre­ res brillantes.
eventual existencia de antígenos comunes en vene­ broncocontricción) y puede durar desde unos breves vención y el uso adecuado del estuche de emergen­ - No usar productos cosméticos con olores muy
nos de diferente origen, lo que hace factible la ocu­ minutos a horas. El shock anafiláctico es un cuadro cia que incluye adrenalina en una jeringa prellenada, fragantes o dulces.
rrencia de reacciones cruzadas frente a picaduras con grave riesgo vital y puede dejar secuelas, pues antihistamínicos y un torniquete, para aplicar en - Emplear repelentes de insectos (beneficio li-
por distintos insectos. Esta inmunoglobulina se ele­ implica alteraciones del sistema cardiovascular(arrit­ caso de repetirse el accidente. mitado).
va precozmente dentro de los primeros siete a diez mias, hipotensión arterial), insuficiencia respirato­ La inmunoterapia consiste en la administración - Instalar mallas en las ventanas.
días, alcanza su nivel máximo durante las siguien­ ria y compromiso progresivo del sistema nervioso subcutánea de dosis relativamente altas estanda­ - Evitar concurrir a zonas de picnic.
tes dos semanas y luego disminuye paulatinamente central (sopor profundo, estado de coma). rizadas de un veneno (alergeno) específico en forma - Usar tarjeta que identifique la condición de
en un lapso de tres a cuatro meses. Uno de los Reacción retardada. Es rara y puede manifes­ periódica, con el fin de lograr niveles de IgG espe­ API.
efectos principales de la lgE es la sensibilización tarse hasta diez días después de la picadura. Su cífica(protectora) y disminuir la IgE específica(rea­ - Enseñar el uso del estuche de emergencia, el
previa del individuo potencialmente alérgico. patogenia es desconocida y puede expresarse como gínica), evitando de esta manera que el paciente cual debería ser personal y estar disponible en par­
- Respuesta de protección. Está mediada por patología neurológica (síndrome de Guillian-Barré, presente reacciones de hipersensibilidad frente a ques públicos, piscinas, zonas de picnic, etcétera.
IgG específica para el:.veneno. La lgG se eleva entre encefalitis, mielitis transversa), renal (glomerulone­ una futura picadura. El empleo de dosis demasiado - Inmunoterapia: En caso de tener indicación y
las cuatro a seis semanas después del accidente, a fritis) u otras (enfermedad del suero, etc.). bajas no ha demostrado utilidad. La inmunoterapia evaluando previamente riesgo/costo/benefició.
una velocidad más lenta que la lgE, conserva sus es específica al alergeno empleado y se basa en la
506 PARASITOLOGIA MEDICA

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Capítulo57

TRANSMISION CONGENITA DE PARASITOS


PATRICIA MUÑOZ

Los microorganismos parasitarios que pueden Los microorganismos parasitarios pueden atravesar
alcanzar al feto en el útero materno se relacionan las vellosidades coriónicas directamente por pene­
directamente con la infección de la madre durante tración activa, lagunas placentarias o diapedesis de
el embarazo. La verdadera incidencia de estas in­ leucocitos o glóbulos rojos infectados. Sin embargo,
fecciones no se conoce con exactitud, principal­ estudios acuciosos han revelado focos microscópi­
mente porque la madre no sabe su calidad de infec­ cos de placentitis, pero en otros no se han podido
tada, puesto que la mayoría de estas infecciones son encontrar, tal vez porque es muy dificil estudiar
subclínicas y porque la presencia de ellas en el histológicamente toda la placenta. Estudios con ADN
recién nacido (RN) generalmente pasa desapercibi­ parasitario a través de la reacción de polimerasa en
da, aunque puedan manifestarse tardíamente por cadena (PCR) e inmunohistoquímicos han logrado
alguna secuela de diversa magnitud (daño ocular, demostrar infección de la placenta.
retardo mental y otras). Sin embargo, algunos datos
pueden ser extrapolados de estudios prospectivos c) Infección materna sin infección placentaria
seleccionados realizados en diversos lugares del ni fetal. En muchos de estos casos los mecanismos
mundo, principalmente en toxoplasmosis y enfer­ defensivos de la madre y del feto estarían jugando
medad de Chagas. Es así como se ha estimado que un papel preponderante. Aunque el microorganis­
la incidencia de la toxoplasmosis congénita varía mo no alcance a la placenta ni al feto, esta infección
entre 0,1 y 0,6% de los RN vivos. En enfermedad de en la madre puede actuar indirectamente sobre el
Chagas se ha estimado que la frecuencia de trans­ crecimiento del feto en el útero. La fiebre, las toxi­
misión del parásito al feto se produce entre el 2 y nas circulantes, anoxia o desarreglos metabólicos
10% de las embarazadas. productos de la enfennedad en la madre, pueden
tenninar en un aborto, mortinato o partos prematu­
Patogenia. La mayoría de las infecciones para­ ros como puede suceder, por ejemplo, en malaria.
sitarias en el feto son el producto de la invasión
sanguínea materna por los agentes involucrados, la d) Infección de la placenta y del feto. Los· mi­
posterior infección de la placenta vía hematógena, croorganismos pueden diseminarse al torrente san­
vía membranas extraplacentarias o debido a la in­ guíneo fetal desde la placenta infectada a través de
fección de fa pared uterina por contigüidad y la émbolos infectados de tejidos coriónicos necróticos
consecuente aunque no necesaria invasión de la o por extensión directa de la infección placentaria
sangre fetal y su posterior diseminación en los teji­ hacia las membranas fetales, con infección secun­
dos fetales. daria del líquido amniótico y aspiración por el feto,
La presencia de algún agente infeccioso parasi­ o por penetración activa del agente parasitario des­
tario en la sangre materna puede ocasionar diversas de la placenta hacia la circulación fetal.
situaciones: La mayoría de los agentes infecciosos que pue­
den infectar al feto en el útero materno Jo hacen a
a) Infección placentaria sin infección fetal. En través de la placenta, o por vía ascendente por el
este caso los parásitos, una vez que han alcanzado canal del parto después de una rotura macro o mi­
los espacios intervellosos del lado materno de la croscópica de las membranas. En el caso de los
placenta, pueden permanecer localizados producien­ agentes parasitarios, casi todos Jo hacen a través de
do una placentitis sin alcanzar al feto. Esta situa­ la placenta.
ción se ha descrito para malaria y Trypanosoma Una vez que el agente parasitario infecta al pro­
cruzi y se la ha relacionado con la presencia de ducto de la concepción, el embarazo puede terminar
macrófagos placentarios y producción local de fac­ en un aborto, en un mortinato, en un mortineonato,
tores inmunes tales como anticuerpos y citocinas. un RN con retardo del crecimiento intrauterino, un
RN prematuro, un RN de término con síntomas y
b) Infección fetal sin infección de la placenta. signos de infección transplacentaria conocido tam-
H
1.
1

510 PARAS/TOLOG/A MEDICA


TRANSMISION CONGENITA DE PARAS/TOS i í
51 I

bién como síndrome de TORCH o un RN aparente­ otro órgano o sistema. En estos casos el diagnóstico
mente sano que puede manifestar tardíamente, se­ diferencial se debe establecer con la eritroblastosis
pecies de animales, sugieren que la fagocitosis, la el niño forma sus propias inmunoglobulinas, pero ;¡
actividad microbicida y la presentación de antíge­ lo hace lentamente. Por otro lado, las IgG maternas 1,1
manas, meses o años después, signos o síntomas de fetal, la enfermedad hemorrágica del RN y la sepsis
nos por los macrófagos en los tejidos pueden no ser se de�dan y eliminan, pudiendo existir un perío­
una infección congénita como ocurre en la toxo­ neonatal.
totalmente competentes en neonatos. do de h1pogammaglobulinemia transitoria entre el
plasmo�is. Los niños que nacen normales pueden manifes­
La capacidad para producir algunas citocinas, t�rcer y cuarto mes de vida extrauterina, cuya mag­ 1 i
Los agentes parasitarios no alcanzan al feto hasta tar a los pocos días o semanas de vida, esta misma
particularmente factor de necrosis tumoral alfa (TNF nitud dependerá del nivel inicial de IgG.
que la placenta no está formada, lo que ocurre alre­ sintomatología florida o síntomas y signos de com­
alfa) e interleucina 6 (IL 6), puede estar moderada­ Sin estimulación antigénica, sólo se sintetizan
dedor del cuarto mes de gestación. Por este motivo promiso de un sólo órgano o sistema. En estos casos
mente reducida en los macrófagos de los tejidos de mínimas cantidades de IgM a partir del segundo
estos agentes infecciosos no son capaces de produ­ es dificil establecer el momento de la infección; si
los neonatos de término y también en los monocitos trimestre del embarazo. En sangre normal de cor­
cir malformaciones congénitas ya que el periodo de ocurrió en el útero, durante el paso por el canal del
sanguíneos de neonatos prematuros. Esta moderada dón, los niveles de IgM son menores a 20 mg/mL
organogénesis a esas alturas ya ha finalizado. parto o a través de la leche materna. En el caso de
deficiencia en la producción de citocinas puede en un niño de término. Estas moléculas de IgM son
Los abortos o mortinatos debido a infecciones las infecciones parasitarias ocurre mayoritariamen­
agravarse más allá por la deficiencia en la produc­ de alto peso molecular, no atraviesan la placenta y
maternas son posibles en algunas infecciones para­ te en el útero. Con mayor frecuencia aún que lo
ción por el neonato de linfocinas de células T, tales su presencia por sobre esos valores en el momento
sitarias, sin poder establecerse con certeza si se antes descrito, los niños que nacen normales pue­
como interferón gamma (IFN gamma) que permite del nacimiento, son indicativos de una infección
produce por la invasión de los tejidos fetales por el den permanecer durante mucho tiempo asintomáti­
· función macrofágica.
la crónica intrauterina.
agente infeccioso o por los efectos indirectos que cos y pesquisarse tardíamente, meses o años des­
Comparados con los adultos, los RN tienen de­ En el cordón nonnalmente no se identifican sino
esta infección puede tener sobre el crecimiento y pués, debido a una infección posnatal persistente,
primida en forma moderada la actividad de la vía pequeñas cantidades de IgA, lo que indica que no
desarrollo del feto, debido a la infección de la pla­ una secuela ocular, motora, auditiva o retardo men­
alterna del complemento, en forma leve la actividad atraviesa la placenta. Su presencia sobre 5 mg/
centa o la infección misma de la madre. tal.
de la vía clásica del complemento y en forma signi­ IO0mL es indicio de infección intrauterina. Inves­
La prematuridad durante una infección trans­ El mayor o menor compromiso del RN depende
ficativa la actividad de los componentes terminales tigaciones recientes han demostrado el valor diag­
placentaria está largamente descrita en varias de las de varios factores. Entre los principales, están el
del complemento, C8 y C9. La concentración de nóstico de las IgA específicas, las que serían más
infecciones parasitarias producto de la infección del momento del embarazo en que el agente infeccioso
fibronectina está también levemente disminuida. sensibles que las IgM específicas para detectar in­
feto en el último trimestre de la gestación. llega al feto, la etapa de la infección en la madre, el
Esto se correlaciona con una capacidad baja del fección congénita. La IgA comienza a aparecer en
El retardo del crecimiento intrauterino en las estado inmunológico materno y las defensas pro-
suero del RN para opsonizar ciertos organismos en las secreciones poco después del nacimiento y au­
infecciones parasitarias puede estar relacionado con pias del RN.
ausencia de anticuerpos o cuando las concentracio­ menta en forma rápida durante las seis primeras
la infección de la placenta que altera la nutrición El neonato se encuentra en desventaja frente a la
nes de anticuerpos séricos están limitadas. semanas de vida. La IgA secretora, abundante en el
del (eto o con la multiplicación del parásito en dis­ agresión de cualquier agente patógeno, pues todos
La generación de actividad quimiotáctica deri­ calostro materno, le confiere al RN inmunidad local
tintos órganos y tejidos del feto. sus mecanismos de defensa, tanto específicos como
vada del complemento está también moderadamen­ pasiva, mientras forma sus propias I�A. Las IgE e
Lo más relevante en las infeccione� parasitarias inespecíficos, se encuentran disminuidos, sobre todo
te disminuida. Además de las diferencias en la fun­ IgD se asocian a hipersensibilidad y no atraviesan
son las infecciones congénitas. Las evidencias clí­ si es prematuro y, por lo tanto, es más susceptible
ción fagocítica, estos factores pueden contribuir a la placenta.
nicas de una infección en el útero pueden estar que a cualquier otra edad.
retrasar la respuesta inflamatoria y a una ineficiente La inmunidad celular específica está mediada
presentes en el momento de nacer, a las pocas sema­ Dentro de los mecanismos inespecíficos, la piel
eliminación bacteriana en el RN. por dos tipos de linfocitos inmunocompetentes (T y
nas de vida e incluso semanas, meses o años des­ y mucosas ofrecen poca resistencia a la penetración
En relación con los mecanismos específicos B). Los linfocitos T derivados del timo, que es el
pués, como una secuela. de gérmenes y están expuestas a sufrir lesiones
humorales, constituidos por los cinco tipos de in­ primer órgano linfoide que se diferencia, se pueden
:i En el momento de nacer lo más característico, durante el parto. Además, la respuesta celular está
munoglobulinas conocidas, el RN nace con gran identificar en el bazo a partir de la duodécima a
1! aunque no lo más frecuente, es un conjunto de sig­ limitada por la presencia de una población de leu­
cantidad de IgG, en su gran mayoría de origen décimocuarta semana de gestación, y en la perife­
\{ nos y síntomas conocidos bajo el nombre de síndro­ cocitos menos numerosa e ineficaz.
materno y transferida a través de la placenta por ria, entre la décimoquinta y vigésima semana. Estos
me de TORCH, sigla que representa a los principa­ El déficit más claramente definido en la defensa
mecanismos activos no bien conocidos. Esta trans­ constituyen la mayoría de los linfocitos de la sangre
les agentes infecciosos capaces de alcanzar al feto por fagocitosis del neonato, es la disminución del
ferencia se inicia precozmente en la vida intraute­ periférica que funcionan en las respuestas inmunes
en el útero y que corresponde a Toxoplasma gondii, pool de neutrófilos y la disminución de la habilidad rina y aumenta a medida. que progresa la gestación, mediadas por células y que colaboran con los lin­
virus de la Rubéola, Citomegalovirus y Herpes de los neutrófilos del neonato para adherir al endo­
pero la mayor parte atraviesa en el último trimestre focitos B o timo-independientes en la respuesta
simple., y en la O numerosos otros agentes tales telio y migrar a los sitios de infección. Deficiencias
y al final del embarazo. Por esta razón, el prematuro mediada por anticuerpos.
como: Treponema pallidum, Parovirus B19, plas­ en la fagocitosis y destrucción parecen ser menos
tiene concentraciones mucho más bajas que el RN La función de las células T en el feto y neonato
modios de la malaria, virus de la Hepátitis B, VIH, significativas, pero pueden ser exacerbadas por una
de ténnino. está desbalanceado comparado con las del adulto.
etc. Aunque esta sigla no es aceptada por muchos limitación en las opsoninas o una densidad bacte­
El neonato está en parte pasivamente protegido La función disminuida incluye citotoxicidad me­
autores, es una buena manera de enfocar el estudio riana local muy alta.
por esta transferencia placentaria de anticuerpos diada por células T, la participación de células T en
diagnóstico de las infecciones transplacentarias. Los monocitos de la sangre de los neonatos es­
matemos, IgG principalmente, en la última parte la hipersensibilidad de tipo retardada y la diferen­
A pesar de que existen algunos signos más ca­ tán normales en número y tan competentes como
del embarazo. Concentraciones de inmunoglobuli­ ciación de las células T ayudadoras por las células
racterísticos que otros de algunas infecciones en los de los adultos en la actividad fagocítica y mi­
nas similares o más altas que las concentraciones de B.
particular, habitualmente en este síndrome la sinto­ crobicida. Sin embargo, la disminuida actividad qui­
la madre se encuentran después de las 34 semanas La disminución selectiva de producción de cito­
matología no permite distinguir el agente infeccio­ miotáctica de los monocitos neonatales puede cau­
de gestación. Sin embargo, la resistencia del neonato cinas por las células T puede contribuir a todos estos
so involucrado y sus signos más frecuentes son la sar una baj? en la distribución de estas células a los
a patógenos bacterianos a los cuales la madre tiene déficit. La falta de células T de memoria en el feto
hepatoesplenomegalia, la prematurez y/o el retardo sitios de infección.
pocos o ningún anticuerpo lgG, está particularmen­ antigénicamente nativo y en el neonato puede con­
del crecimiento intrauterino (RCIU), la anemia, la Los datos experimentales sobre la función de los
te comprometido por una inhabilidad para producir tribuir en parte a la disminución de la inmunidad
ictericia, el síndrome purpúrico y el compromiso macrófagos tisulares en neonatos comparado con
anticuerpos contra polisacáridos bacterianos. mediada por células T y en la producción de citoci­

. ·.·.·. ·•.·. •l•., •.··.·


variable del sistema nervioso central o de cualquier los datos de los macrófagos tisulares de ciertas es-
Al final del embarazo y después del nacimiento, nas. Las limitaciones en el repertorio disponible de

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5-12 PARASITOLOGJA MEDICA A s O GEN

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513

los receptores alfa y beta de las células T, no parecen Toxoplasmosis tivo, la paciente se encuentra lib:: d: �:::::: : :::�:::í:I:::� Toxoplasmosis ).
jugar un papel importante en limitar la respuesta por lo tanto, expuesta a adquirirla durante el emba- Se ha establecido que el mayor riesgo para el ,i
inmune por el neonato, _aunque ellos están presentes La toxoplasmosis congénita constituye un pro­ razo. Debe controlarse cada dos meses para pesqui- feto en cuanto a severidad de las lesiones, ocurre
1

en el feto antes de la mitad de la gestación. blema pediátrico conocido por las infecciones gene­ sar una posible seroconversión. cuando la madre se infecta t ¡ decima ,
· · y ¡ª ._ ¡' ,
Siguiendo a la infección, la adquisición de res­ ralizadas graves que suelen observarse en recién b) Si la RSF es positiva a título bajo (menor de vigesimocuarta semana de ge:�a��ó:.
;
,

puesta detectable antígeno-específica dependiente nacidos (RN) y lactantes y por las secuelas en ojo y 300 UI equivalente a dilución 1: 1000) y con RIFI- La placenta puede estar infectada mucho antes
de células T está retardada. La base para este retar­ cerebro que presentan la gran mayoría de los niños lgM negativa, es muy probable que se trate de una que el feto. Como resultado de este retraso los
do es desconocida. No hay evidencias de que la infectados que nacen aparentemente sanos. La in­ infección antigua, por lo tanto, no existe peligro de anticuerpos lgG específicos pueden ser transfe;idos
madre transfiera inmunidad especifica de células T fección transplacentaria se presenta habitualmente transmisión al feto, y no sería indispensable reali- de la madre al feto antes que éste se infecte. En tal
al feto. en forma subclínica estimándose que cerca de un zar nuevos controles serológicos; situación, cuando la transmisión del parásito al feto
Aunque las células NK (asesinas) aparecen tem­ 75% presentará alguna secuela, semanas, meses o c) Si se encuentra RSF positiva a título alto con ocurre, ya está pasivamente inmunizado, lo cual
pranamente durante la gestación y están presentes años después. RIFI-IgM negativa, o bien RSF positiva a título bajo puede provocar en el niño un retardo en el desarro-
en número normal desde la mitad y hasta el término Se ha calculado que su incidencia varía entre un y RlFI-IgM positiva, se debe continuar el estudio llo de la inmunidad activa.
de la gestación, el fenotipo de alrededor del 50% de O,1 y 0,6% de los RN, según diversos estudios serológico por la posibilidad de una toxoplasmosis La infección subclínica del RN es lejos la pre-
estas células es inmaduro y esta inmadurez celular prospectivos realizados en Europa Central y Esta­ reciente. sentación más frecuente de la toxopjasmosis congé-
produce una disminución de la actividad citotóxica dos Unidos. Si bien la incidencia es relativamente En la actualidad, la aplicación de técnicas más nita. Sólo un 10% de los rieonatos infectados mani-
comparada con las células de los adultos. Esta in­ baja en relación al número total de nacimientos, los sensibles para la pesquisa de IgM específica, ha fiesta su enfermedad al nacer y estas cifras aumen-
madurez está asociada con una actividad funcional niños que sobreviven con una toxoplasmosis congé­ contribuido al diagnóstico más exacto de estas in- tan a un 30% cuando se realiza examen de fondo de
disminuida. nita severa, significan una carga fisica y económica fecciones durante el embarazo, siendo igualmente ojo.
El efecto de la prematuridad sobre la función importante, tanto para la familia como para el país. válidas las premisas anteriores (ejemplos: !SAGA, En 1954, Thalha1nmer propuso un esquema para
inmune es múltiple. El retardo del crecimiento in­ Frenkel considera que el costo anual que significa­ ELIFA, DS-ELISA, ELISA REVERSA, etc.). En la mejor comprensión de la amplia gama de mani-
trauterino parece tener un mayor efecto sobre la ría el nacimiento de alrededor de 3.300 niños infec­ fechas más recientes se ha empleado, además, una festaciones clínicas que presentan estos RN infecta-
función de las células T que sobre otros aspectos del tados con Toxoplasma gondii cada año en Estados técnica doblemente analítica, PIC-ELISA, que utiliza dos congénitamente. (Véase el Capítulo 29: Toxo-
sistema inmune. Estos niños tienen un timo más Unidos, sería el doble que el costo de una pesquisa un antígeno polivalente y que sería capaz de diag- plasmosis).
pequeño y con niveles más bajos en la actividad de serológica de la embarazada en el mismo período de nosticar el 85% de las toxoplasmosis en los RN. En la forma generalizada, existe compromiso
la hormona timica sérica que los niños sanos. Tales tiempo. Aun así, estima que es más importante la La transmisión transplacentaria del T. gondii del sistema hematopoyético, reticuloendotelial y
niñós tienen también disminuido el número de cé­ prevención. En Chile, sobre la base de datos epide­ puede provocar una fetopatía y no una embriopatía, pulmonar. En este grupo, la meningoencefalitis es
lulas T y la hipersensibilidad retardada en las reac­ miológicos generales, se ha calculado que el riesgo puesto que este protozoo no atraviesa hacia el feto casi de regla, pero no es infrecuente que sea asinto-
ciones cutáneas. de infección congénita alcanza a un 0,28%. hasta que la placenta no se encuentra totalmente mática y sólo se evidencie por un LCR anonnal
El RN posee suficientes linfocitos T capaces de El riesgo de adquirir la infección está relaciona­ formada, lo cual ocurre cuando se ha completado el (hiperalbuminorraquia y aumento de células princi-
responder adecuadamente ante la presencia del do con la proporción de mujeres que adquieren la período de organogénesis. En el caso de que se palmente mononucleares). La patología revela una
antígeno, a partir de los cuatro a diez días de vida. primoinfección por T. gondii· durante el embarazo. produzca la infección del huevo o del embrión, la encefalomielitis aguda o subaguda, inflamación de
Este período de latencia puede ser fatal para el niño Se ha establecido que sólo en esta circunstancia gestación puede terminar en aborto. las meninges, granulomas inflamatorios de 2 a 3
que adquiere precozmente un agente patógeno. existiría peligro para el feto. Este riesgo depende de La infección del feto es el resultado de una mm de diámetro, aislados o confluentes, con células
Los linfocitos B o timo-independientes, se iden­ dos factores: a) el número de mujeres libres de in­ placentitis con pequeños focos microscópicos de mononucleares y epitelioideas, y extensas zonas de
tifican a la quinta semana de vida intrauterina. En fección por T. gondii antes del embarazo; y b) de las necrosis celular y mínima respuesta inflamatoria. necrosis rodeadas de tejido inflamatorio. Se pueden
el cordón hay mayor cantidad, tanto en número posibilidades existentes en la región en que vive de La frecuencia de la transmisión y las consecuen- encontrar zoitos libres o intracelulares de T. gondii
como en porcentaje, que en el adulto, pero carecen adquirir la infección durante los nueve meses ·de cias para el feto, dependerán estrechamente de la en los · procesos inflamatorios alrededor de zonas
de experiencia inmunológica, con excepción de la gestación. etapa del embarazo en que se encuentra la madre necróticas.
transmitida por la madre. La primoinfección habitualmente pasa inadver­ cuando adquiere la infección. El compromiso ocular, presente en un alto por-
Además de los aspectos inmunológicos mencio­ tida en la madre y sólo en una minoría de los casos La toxoplasmosis adquirida por la madre poco centaje de las toxoplasmosis congénitas, manifiesto
nados en el neonato, existen factores dependientes se presenta como una linfoadenopatía, astenia, adi­ antes de la concepción, excepcionalmente transmi- al nacer, o meses después, se caracteriza por estra-
del parásito, como son el grado de virulencia, su namia y febrículas, semejando una virosis, por lo te la infección al feto (menos de un 2%). Si la bismo, nistagmus, microftalmia, uveítis y, a veces,
predilección por ciertos tejidos, su forma de multi­ que no se piensa én esta patología. El diagnóstico se infección de la madre ocurre en el primer trimestre por cataratas, escotomas y ambliopía. La coriorre-
plicación y la cepa, que influirán en el mayor o podrá hacer sobre la base de una investigación se­ del embarazo, la frecuencia de la transmisión es tinitis es el signo más constante y característico de
menor grado de compromiso del feto. rológica durante el embarazo. baja (10%), pero tiene generalmente consecuencias todas las lesiones oculares; puede ser uni o bilateral
Desmonts ha podido establecer que alrededor de graves. El feto puede morir en el útero o a los pocos y la mácula se encuentra frecuentemente compro-
TRANSMISION CONGENITA DE PROTOZOOS un 33% de las madres que adquieren la infección días de nacido, y si sobrevive, estará severamente metida. (Véanse los Capítulos 29: Toxoplasmosis, y
durante el embarazo la transmite al feto. Sus obser­ dañado. Las madres que adquieren la infección al 46: Parasitosis oculares).
Los protozoos tisulares son por su tamaño y vaciones se han basado en el estudio serológico final del embarazo, transmiten el T. go11dii en aire- En la etapa de secuelas, se describe la clásica
ciclo biológico, los que con mayor frecuencia alcan­ sistemático y precoz de la embarazada, utilizando dedor del 80% de los casos, pero la mayor parte de tríada de Sabin con hidrocefalia, coriorretinitis y
zan al feto, siendo los principales el Toxoplasma las reacciones de Sabin y Feldman (RSF) y reacción los neonatos presentará una forma leve o subclínica calcificaciones cerebrales. En estos casos, los ha-
gondii, el Trypanosoma cruzi y los plasmodios de la de inmunofluorescencia indirecta con anti-IgM para de la enfermedad; sin embargo, a veces puede tener llazgos patológicos más frecuentes son la atrofia
malaria y, con menor.frecue.ncia, los agentes de la Toxoplasma gondii (RlFI-IgM), describiendo las consecuencias serias para e( RN y semanas o meses cortical, las dilataciones ventriculares, la obstruc-
tripanosomosis africana, de la neumocistosis y de la siguientes situaciones: más tarde, manifestar compromiso ocular o una ción de acueductos y las calcificaciones intracere-
leishmaniosis. a) Si el primer control serológico resulta nega- toxoplasmosis congénita generalizada grave. (Véa- brales, principalmente periventriculares. Se pueden
-514 PARASITOLOGIA MEDICA TRANSMIS!ON CONGENITA DE PARAS/TOS 5[5

encontrar quistes de T. gondii rodeados de tejido basarse en exámenes serológicos en sangre de cor­ espiramicina hasta que se obtenga un diagnóstico de tamizaje durante los dos primeros meses de
cerebral nonnal. dón o del RN, que pennitan hacer distinción entre definitivo. embarazo y el seguimiento mensual de las serone­
El diagnóstico de la infección congénita habi­ Aes fonnados por el feto o el RN y los Aes mater­ En los RN aparentemente sanos, con sospecha gativas con el fin de detectar seroconversión, hasta
tualmente es dificil. Se basa en el aislamiento del nos, transferidos pasivamente. Al respecto, se han de infección congénita, según serología a título alto el desarrollo y empleo del diagnóstico prenatal,
parásito, así como en la persistencia de anticuerpos practicado importantes estudios en Europa y USA; en la madre, se recomienda administrar espiramici­ utilizando diversas metodologías y técnicas como la
contra T. gondii después de la desaparición de los sin embargo, ninguno de los métodos, actualmente na hasta que se defina el diagnóstico. reacción de la polimerasa en cadena (PCR) en san­
anticuerpos maternos transmitidos pasivamente. al alcance clínico, han dado resultados satisfacto­ Las infecciones fetales ocurren sólo cuando la gre fetal y el tratamiento de la embarazada y su
Para ello, se puede efectuar: a) inoculación en ani­ rios como para establecer un criterio definitivo con madre se primoinfecta durante el embarazo, puesto recién nacido por períodos prolongados. Las estra­
males, de la placenta, de la sangre de cordón y de respecto a un programa de tamiz, lo que deriva, que las defensas inmunitarias de una embarazada tegias dependerán en gran medida de los recursos y
la .sangre del neonato en el momento del nacimien­ principalmente, de dificultades técnicas. Especial con toxoplasmosis crónica evitarían la transmisión tecnología disponibles, y de la incidencia de la toxo­
to; b) búsqueda de anticuerpos IgM específicos en la importancia tendría la pesquisa de lgM formada del T. gondii durante las fases tardías de la infec­ plasmosis congénita en una determinada zona.
sangre de cordón y del RN; y c) estudio paralelo de por el feto. ción. Sin embargo, este concepto establecido duran­ Cualquiera sea la situación, lo que está claro es que
IgG en suero de la madre y del niño, repetidos por Para el tratamiento de la embarazada con toxo­ te décadas para las mujeres inmunocompetentes, la toxoplasmosis congénita debe ser abordada en
no menos de tres semanas de intervalo. plasmosis reciente, se han recomendado diferentes pierde su validez al tratarse de embarazadas que forma adecuada a la realidad de cada país, para
Mediante esta metódica, el diagnóstico se puede pautas: presentan alguna deficiencia inmunitaria. En for­ evitar o reducir en forma importante las secuelas.
establecer en un pequeño número de casos en el l . Iniciar el tratamiento con espiramicina en el ma creciente en la literatura han ido apareciendo
primer examen (20 a 25% ), por la demostración de momento de diagnosticar la infección y aplicar, en infecciones congénitas por T. gondii relacionadas Enfermedad de Chagas
una síntesis fetal de anticuerpos IgM; en otros po­ forma cíclica, curas de cinco semanas (tres semanas con compromiso inmunitario de la madre.
cos casos, sólo después de seis semanas, cuando las de tratamiento, seguidas de dos semanas de descan­ En 1990, Desmonts y Couvreur observaron in­ Desde que Dao en Venezuela describe, en 1949,
inoculaciones experimentales resultan positivas, y so) hasta el día del parto con una dosis diaria de fección congénita por T. gondii en hijos de cuatro el primer caso de infección congénita por el Trypa­
en el resto de las infecciones congénitas, se confir­ espiramicina de 2 a 3 g dividida en cuatro dosis. portadoras de toxoplasrnosis crónica de tres a once nosoma cruzi, se han comunicado un poco más de
ma solamente entre los seis y doce meses de edad Otros autores usan espiramicina en forma continua­ años de evolución y desencadenadas por diversas un centenar de casos, lo que hace suponer que este
por persistencia de la serología. La radiografía de da hasta el término del embarazo. afecciones inmunosupresivas. En los cinco niños modo de transmisión es infrecuente. Sin embargo,
cráneo y la TAC pueden ser de utilidad al revelar 2. Iniciar el tratamiento con pirimetamina y que nacieron, incluyendo una pareja de mellizos, se esto sólo se refiere a los casos sintomáticos.
las lesiones. sulfadiazina después de la decimocuarta o decimo­ diagnosticó toxoplasmosis generalizada grave y fatal A pesar de que la infección congénita es una
La pesquisa de la toxoplasmosis congénita asin­ sexta semana de la gestación; aplicarlo durante dos en dos casos, afección ocular monosintomática en entidad clinicopatológica bien definida, requiere
tomática del RN constituye un problema de gran semanas, seguido de un período de descanso de tres uno e infección asintomática en los dos restantes, mayores estudios debido a la presentación subclínica
envergadura y es factible de practicar mediante a cuatro semanas, y continuar con este esquema uno de ellos hermano mellizo del RN fallecido. Si de muchos casos que suelen manifestarse semanas
controles serológicos sistemáticos en embarazadas hasta el día del parto con una dosis de pirimetamina bien esta casuística no incluyó mujeres infectadas o meses después del nacimiento.
y/o del RN. El estudio de las embarazadas tiene por de 25 mg/día y sulfadiazina en dosis de 4 a 6 g al con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), Se ha estimado que en regiones endémicas la
objeto diagnosticar las primoinfecciones maternas día. los autores concluyeron que la toxoplasmosis cróni­ incidencia de esta infección congénita en RN que
que ocurren durante el embarazo, lo que cumple En los casos en que existe un diagnóstico prena­ ca materna debería constituir un riesgo importante pesan al nacer hasta 2.000 g, es de un 2%. Estos RN
una doble finalidad: a) tratar las infecciones mater­ tal de tóxoplasmosis fetal, se utiliza este último en embarazadas VIH positivas. pueden ser prematuros o pequeños para la edad·
nas, lo que evitaría la transmisión del parásito, en esqúema, pero alternando con espiramicina hasta el En efecto, casos de infección concomitante por gestacional.
cerca del 50% de los casos; y b) reconocer los casos término de la gestación. T. gondii y virus VIH no tardaron en aparecer y el Las investigaciones sobre la frecuencia de la
con riesgo de infección congénita, para someter a El tratamiento de los RN con diagnóstico o sos­ número de publicaciones relacionadas fue rápida­ transmisión intrauterina del T. cruzi se encuentra
los niños (fetos) a estudios prenatales y, principal­ pecha de toxoplasmosis congénita debe realizarse, mente en aumento. La mayoría de los niños que en pleno desarrollo en diferentes países de Latino­
mente, posnatales. sea ésta clínicamente manifiesta o sea asintomática. nacían infectados eran aparentemente sanos, pero américa y es factible de aplicar en las zo¡¡as de
Los estudios perinatales han sido practicados En los casos con toxoplasmosis manifiesta se desarrollaban una toxoplasmosis severa durante los endemia chagásica en Chile, a través de exámenes
con éxito en Francia, mediante el seguimiento de administrará pirimetamina más sulfadiazina por primeros meses de la vida. Esto demostró que la serológicos sistemáticos en el binomio madre-hijo.
las embarazadas que se primoinfectan durante la veintiún días, separados por una cura de espirami­ inmunodepresión de la embarazada facilita la trans­ La incidencia de estas infecciones varía entre 1 y
gestación. A las veinte semanas, a través de agujas cina de treinta a cuarenta y cinco días. Este trata­ misión transplacentaria del toxoplasma y que en el 10%, según diversos autores.
guiadas por ultrasonido, se obtiene líquido y sangre miento se repetirá tres a cuatro veces durante el RN con infección doble, la infección con VIH ace­ En los estudios prospectivos del binomio ma­
fetal para efectuar detenninaciones de lgG e lgM primer año de vida. lera el desarrollo de una toxoplasmosis fatal y vice­ dre-hijo realizados en nuestro medio, hemos obser­
específicas e inoculación experimental, lográndose En los casos que presenten procesos inflamato­ versa. A raíz de estas publicaciones, se recomienda vado recién nacidos de ténnino, adecuados para la
así diagnosticar la infección intrauterina por T. rios activos de coriorretinitis, síntomas de infección aplicar controles serológicos sistemáticos para toxo­ edad gestacional, sin manifestación clínica de in­
gondii. generalizada, de encefalitis activa (según alteracio­ plasmosis en las embarazadas inmunocomprome­ fección, pero con xenodiagnóstico positivo al nacer,
En nuestra experiencia, el estudio serológico nes del LCR), se recomienda agregar corticoides. El tidas, especialmente en aquellas infectadas con el y que en un electrocardiograma efectuado a los ocho
sistemático de todas las embarazadas no se justifi­ tratamiento es continuado en dicha fonna hasta que VIH, y el tratamiento de las mujeres infectadas por meses de edad ha revelado alteraciones de la con­
caria y no sería factible de realizar �n Chile. se observe una mejoría del proceso inflamatorio (a toxoplasma para disminuir el riesgo de la transmi­ ducción aurículo-ventricular. Por otro lado, las
El estudio sistemático de todos los RN es igual­ nivel del ojo o LCR). Seguidamente, se disminuyen sión congénita del parásito. madres de estos niños en su maytJríá son asintomá­
mente problemático; sin embargo, su realización las dosis en forma progresiva. Las estrategias empleadas para prevenir la toxo­ ticas y desconocen su calidad de infectadas.
parecería menos engorrosa, en especial, si se logra­ Aquellos RN asintomáticos con riesgo de infec­ plasmosis congénita siguen siendo controvertidas. El T. cruzi alcanza la circulación fetal por via
ra combinar el estudio. de la:toxoplasmosis en lós­ . ·ción congénita por infección toxoplásmica reciente Estas van desde la educación de la población para hematógena, atrav�ando las vellosidades placen­
·RN con el de otras infecciones prenatales (lúes, de la madre, deben recibir una cura con pirímetami­ impedir que una mujer embarazada se infecte du­ tarias. Este pasaje, generalmente, se debe a una
Chagas, CMV} La pesquisa de dichos casos debe na más sulfas durante veintiún días, seguida de rante el embarazo, el empleo de amplios programas placentitis provocada por la multiplicación del pa-
'516 PARASITOLOGIA MEDICA TRANSMIS/ON CONGEN/TA DE PARAS/TOS 517

rásito. También se ha postulado que podría deberse mente, en polimorfonucleares. A veces es predomi­ Una vez diagnosticada la infección congénita, taria, puede ser considerada en un niño de semanas
a una penetración activa del parásito hacia la circu­ nantemente perívascular. Formas amastigotas del sea ésta sintomática o subclínica, deben realizarse o meses de edad, nacido de madre malárica, en cuya
lación fetal. T. cruzi se pueden encontrar en cualquier órgano. algulJ.OS exámenes previos al tratamiento para una sangre periférica, se han encontrado los protozoos.
La madre se puede encontrar en cualquier etapa Se han descrito dos tipos histológicos de la en­ evaluación posterior: ECO, examen neurológico, Alrededor de doscientos casos de malaria con­

li
de la infección. En la fase aguda, la parasitemia es fermedad de Chagas congénita. En uno, los parási­ estudio citoquímico del LCR, ecotomografia cere­ génita han sido descritos, aunque probablemente
intensa y persistente, por lo que debiera esperarse tos se ven en las fibras musculares y, en el otro, se bral, examen de fondo de ojo, hemograma, pruebas este hecho ocurra con mayor frecuencia. La inci­
un mayor riesgo de infección para el RN; sin em­ encuentran en su mayoría, en células del sistema hepáticas y estudio radiológico del tubo digestivo. dencia de la infección congénita es alrededor de un
bargo, esta fase es muy corta, lo que puede explicar reticuloendotelial y en células gigantes. Para el tratamiento de la enfermedad de Chagas 0,3% en madres inmunes que viven en zonas de
los pocos casos que se han comunicado en esia El diagnóstico de los casos sintomáticos es esen­ congénita se han utilizado dos medicamentos que hiperendemia, pudiendo elevarse a un 10% en
·! situación. Durante la fase latente y crónica, existen cialmente clínico y el estudio sistemático del origen han d�mostrado eficacia en la fase aguda de la in­ mujeres no inmunes que habitan en áreas libres de
parasitemias intermitentes, por lo que la transmi­ del TORCH orientará sobre sus etiologías. La con­ fección y, por ende, en los casos congénitos. A malaria y que viajan a zonas de endemia.
sión del parásito también puede ocurrir. firmación diagnóstica se basa en la demostración de saber: En regiones donde la malaria es endémica, la
Se describen numerosos casos de infecciones los tripomastigotos en la sangre circulante del RN. l . Nifurtimox (Lampit®), en dosis de 8-10 mg/ enfermedad entre las mujeres es más frecuente en
maternas sin que exista la infección del feto. Los El examen de sangre fresca, entre lámina y lamini­ kg/día, durante sesenta días, asociado a fenobarbital, las embarazadas, debido presumiblemente a una
factores que intervienen en la infección transpla­ lla, los frotis sanguíneos, las gotas gruesas y el debido a los efectos adversos de la droga, en dosis inmunodepresión multifactorial transitoria, que se
centaria no son bien conocidos, aunque se presume método de Strout, son las técnicas de mayor uso de 5 mg/kg/día, mientras dure el tratamiento. manifiesta en la segunda mitad de la gestación.
que las diversas cepas del T. cruzi serían importan-. para tales propósitos; pero, si son negativas, no Dentro de sus efectos adversos destacan la ano­ Las parasitemias en las embarazadas están rela­
tes. Se ha comunicado que el parásito es capaz de descartan el diagnóstico, porque puede coincidir rexia, los vómitos, temblores, polineuritis y convul­ cionadas con la paridad. Las primíparas tienen mayor
producir abortos y mortinatos. Es posible la infec­ con una baja parasitemia y, en estos casos, el xeno­ siones que desaparecen al interrumpir el medica­ parasitemia que las multíparas. Lo mismo se ha
ción congénita en embarazos ulteriores, como tam­ diagnóstico es de gran utilidad. Una reacción sero­ mento. observado en relación con los títulos de anticuerpos
bién en gemelos. lógica IgG positiva sólo nos señala el posible diag­ 2. Benznidazol (Ragonil®), en dosis de 5-7 mg/ contra los plasmodios medidos con la reacción de
Las placentas infectadas muestran un importan­ nóstico etiológico. El hallazgo de IgM específica kg/día durante treinta y cinco días. Sus efectos ad­ inmunofluorescencia indirecta. Esta situación se ha
te aumento de peso, se ven pálidas, amarillentas y, certifica el diagnóstico, pero su ausencia no lo des­ versos se producen fundamentalmente a nivel de explicado por un aumento de la susceptibilidad a la
a veces, edematosas, con un aspecto similar al en­ carta. El estudio citoquímico del LCR es importan­ piel y, en menor grado, a nivel hematológico. enfermedad durante el primer embarazo.
contrado en la sífilis, en la toxoplasmosis o en la te, puesto que sus alteraciones indicarían un com­ Al finalizar el tratamiento específico se debe Muchos parásitos que pasan a través de la pla­
eritroblastosis fetal. Se describe inflamación intra e promiso neurológico antes que se manifieste clíni­ hacer control serológico y parasitológico con xeno­ centa son destruidos en la circulación del feto o del
intervellositaria de carácter subagudo, crónico o camente. diagnóstico, por lo menos, una vez al año y hasta los RN, gracias a los anticuerpos matemos transferidos
granulomatoso. Pueden encontrarse formas amasti­ En la pesquisa de las infecciones congénitas seis años, repitiendo aquellos exámenes que resul­ pasivamente. Es posible que éste sea uno de los
gotas de T. cruzi, principalmente en las células de asintomáticas, el estudio se inicia con la detección taron alterados previos al tratamiento. factores responsables de la baja frecuencia de detec­
Hofbauer y acúmulos de células mononucleares y serológica de la infección materna en muestras de Tal como ocurre con toxoplasmosis congénita, ción de casos congénitos, considerando que la in­
células gigantes. sangre de embarazadas o sangre de cordón. Todo la enfermedad de Chagas congénita no está al mar­ fección de la placenta es muy elevada. Hay un estu­
Las manifestaciones clínicas son semejantes a resultado positivo indica riesgo de transmisión con­ gen de lo que ocurre con la infección por VIH en dio brasileño que demostró transferencia de anti­
las descritas para el síndrome de TORCH: prema­ génita y,' en estos casos, debe estudiarse al niño Latinoamérica. La posibilidad de ocurrencia de una cuerpos matemos específicos en el 50% de los ca:
turez, hepatoeplenomegalia, anemia, ictericia, ede­ desde su nacimiento. Dicho estudio implica un exa­ infección concomitante de T. cmzi y VIH en RN sos. En tanto, en algunos casos sin esta protección,
ma, lesiones petequiales y hemorrágicas de la piel, men clínico completo, búsqueda del parásito en hijos de madres portadoras de ambas infecciones, fueron vistos parásitos en los vasos fetales placen­
temblores y convulsiones. El compromiso menin­ muestras de sangre, aplicación de xenodiagnóstico agrava la evolución de ambas infecciones como ya tarios sin que se detectara parasitemia en el RN.
goencefálico puede ser asintomático, pero suelen y estudios serológicos (lgG e IgM) seriados. El ren­ se ha descrito en Argentina. Parece que otros factores deben desempeñar un papel
encontrarse alteraciones del LCR con aumento de dimiento del xenodiagnóstico, en estos casos, supe­ de importancia en la resistencia del feto y RN frente
las proteínas y de las células, principalmente ra a los otros exámenes directos o de certeza. Malaria a esta infección.
mononucleares. También puede encontrarse lesio­ Aquellos niños con demostración del parásito (o La hemoglobina fetal ofrece protección al feto y
nes oculares al examen de fondo de ojos, como suele IgM positiva) en fecha del nacimiento, serán some­ La malaria congénita no ha sido claramente RN contra la malaria y, por eso, la baja morbilidad
:1
''
ocurrir en otras infecciones intrauterinas, en estos tidos a estudios clínicos especializados, tratamien­ definida. Algunos autores, consideran la transmi­ de esta infección en los primeros tres meses de la
casos, las estructuras comprometidas son del polo tos y controles clinicoserológicos periódicos duran­ sión congénita de los plasmodios cuando los pará­ vida, cuando los niveles de hemoglobina fetal aún
posterior: papila, coroides, retina y vítreo. te varios años. sitos pueden ser demostrados en la sangre periférica son elevados.
En el aparato gastrointestinal se puede encon­ Los RN con serología positiva al nacer, sin de­ del niño en el primer día de vida, otros en cambio, En Africa, se encontró infección placentaria en
trar infiltrado inflamatorio en el esófago y ausencia mostración del parásito, seguirán en observación han considerado esta transmisión cuando el parási­ el 33% de los gestantes con malaria y la positividad
o disminución de células neuronales de los plexos con controles serológicos y clínicos durante los pri: to ha sido confirmado en el niño en los primeros en el cordón umbilical fue de 22%. En tanto, en 100
mientéricos, que se manifiestan por regurgitaciones meros meses de vida. Si la serología es negativa siete días de vida. placentas de embarazadas maláricas estudiadas en
y disfagia. En Chile se ha descrito un caso de enfer­ durante dicho período, se descarta la infección con­ En áreas endémicas, donde la malaria es adqui­ Rondonia, Brasil, zona de alta endemicidad, se ob­
medad de Chagas congénita que presentó un me­ génita, resultado que ayudarla a precisar la inciden­ rida a muy temprana edad, debido a la existencia de servó infección malárica en el 28%. De estas pla­
gaesófago diagnosticado a los once meses de edad. cia de la infección congénita en un grupo de madres los mosquitos, puede ser dificil distinguir entre una centas, el 85,7% mostró parásitos y el 14,3% sólo
Los pacientes que han fallecido por enfermedad chagásicas. Un resultado positivo, obtenido a través malaria congénita y un caso adquirido después del pigmento malárico. En ápenas 2% de los casos se
de Chagas congénita, presentan como los órganos de los controles posnatales, si bien diagnosticaría nacimiento, principalmente porque en la mayoria de detectaron parásitos en la sangre del cordón umbi­
más afectádos:•el corazón, esófago, intestino, cere­ una infección por T. cmzi, no permitiría precisar el _los casos, la_ malarj¡¡ �ongénita no se manifiesta al lical y en 9%, en los vasos de las vellosidades y de
bro, musculoesquelético y piel. La inflamación con­ origen congénito o adquirido después del nacimien­ nacer, sino algunas semanas después. En cambio, en la placa corial. En estos últimos casos es probable
siste en células mononucleares y, menos frecuente- to. áreas libres de malaria, la transmisión transplacen- que los plasmodios hayan alcanzado al feto.
-:i:-

51.8 PARASITOLOG!A MEDICA TRANSMISION CONGENITA DE PARAS!TOS 519

La malaria epidémica ha sido causa importante endotelio vascular, pudiendo causar obliteración y asociado con títulos de anticuerpos significativa­ Leishmaniosis
de aborto, prematuridad, mortineonatalidad y retar­ ruptura de los vasos y áreas de necrosis. Esta alte­ mente altos.
do del crecimiento intrauterino. En Africa también raciones ocurren principalmente en la infección por Son muy raros los casos bien documentados de
han sido descritos casos de infección congénita Plasmodium fa/cipar11111. En el estudio necrópsico Trípanosomosis africana leishmaniosis visceral congénita, tal vez porque los
subclínica. En Senegal, en 35 casos detectados al se pueden observar parásitos en glóbulos rojos, en síntomas aparecen tardíamente, en general, después
nacer, en 55% de ellos hubo desaparición espontá­ el interior de los vasos o en macrófagos, principal­ Los parásitos responsables de esta enfermedad de los doce meses de vida, y es dificil establecer la
nea de los plasmodios a los nueve días. Por otro mente en bazo, hígado y médula ósea. pueden ser transmitidos transplacentariamente, pero vía transplacentaria, a menos que el niño permanezca
lado, todos estos lactantes fueron negativos a los 30 sólo unos pocos casos, alrededor de una treintena, después del nacimiento en áreas no endémicas. Por
Las características clínicas de esta infección
han sido comunicados y la mayoria de ellos produ­ eso es muy importante que los RN, hijos de madres
1, ¡
días y a los ocho meses de edad, evolucionando congénita son semejantes a las de otras infecciones 1
bien, estando normales y con buen estado general. congénitas y los signos más frecuentes incluyen cidos por el Trypanosoma bmcei gambiense y sólo infectadas, sean examinados al momento de nacer y
Las cuatro especies de plasmodios pueden pro­ prematurez, retardo del crecimiento intrauterino, dos casos por el Trypanosoma bmcei rhodesiense. lo mismo las placentas. Los niños deberían ser segui­
ducir la infección del feto. anemia de tipo hemolítico, hepatoesplenomegalia, Sin embargo, es posible que este problema esté dos durante el primer año de vida. Las manifestacio­
Diversos mecanismos han sido postulados para fiebre e ictericia. La fiebre es un hecho constante, subestimado por la falta de investigaciones prospec­ nes clinicopatológicas de la enfermedad congénita
explicar la patogenia de la infección congénita: ocurre de forma intermitente o regular, pero no tivas en embarazadas en zonas endémicas y por la son semejantes a las observadas en niños mayores
a) pasaje del parásito desde la madre hacia la adquiere el carácter paroxístico que se observa en descripción de muchas muertes neonatales en regio­ o adultos.
circulación fetal, a través de daño placentario por la los niños mayores o adultos. La esplenomegalia nes infectadas con tripanosomiasis africana que Las formas tisulares son los amastigotos que son
infección parasitaria o por el daño placentario du­ puede adquirir grandes proporciones con hiperes­ escapan a la atención médica. idénticos a los amastigotos de T. cntzi y muy pare­
rante el parto; plenismo y ruptura. Otros hallazgos menos especí­ En embarazadas infectadas con tripanosomosis cidos a las formas tisulares de T. gondii. El diagnós­
b) penetración directa del parásito a través de ficos incluyen pérdida de peso, anorexia, decaimiento africana, se han descrito abortos, prematuros y mor­ tico diferencial se establece por el kinetoplasto y el
las vellosidades coriónicas; general y alteraciones gastrointestinales como: dia­ tinatos. Se piensa que el mecanismo de base es la alta de certeza, a través de métodos inmunohistoquimi­
c) circulación de parásitos desde la madre a la rrea, vómitos, deshidratación y alteraciones hidro­ infección de la placenta. cos usando anticuerpos antitoxoplasma y antileish­
sangre fetal, a través de la piel del feto en el mo­ electrolíticas. Algunos lactantes pueden presentar La infección transplacentaria ha sido demostra­ mania
mento del parto; alteraciones renales caracterizadas por un síndrome da en niños que han nacido de madres infectadas,
d) pasaje de parásitos dentro del líquido amnió­ nefrótico. Se ha descrito también irritabilidad, letar­ en áreas no endémicas o el parásito ha sido iden­ Neumocistosis
tico. gia y convulsiones como consecuencia de la fiebre tificado en sangre periférica en los primeros cinco
Las lesiones placentarias descritas con mayor o debido a compromiso cerebral. La complicación días de vida. Hay referencias de un caso que pre­ La primera observación de infección congénita
frecuencia son los depósitos de pigmento malárico neurológica en la malaria congénita es siempre de sentó hidrocefalia al nacer, con episodios febriles por Pneumocystis carinii fue descrita en 1962, en un
en cantidades variables y exceso de fibrina perive­ pésimo pronóstico, siendo generalmente fatal. y convulsivos y, otro caso que viviendo en área no mortinato en. el cual se encontró el parásito en los
llositaria. También se han encontrado acúmulos de El diagnóstico definitivo de malaria congénita endémica, desarrolló manifestaciones neurológicas pulmones. El suero materno contenía anticuerpos
eritrocitos matemos parasitados, concentración de está basado en la presencia de parásitos en exáme­ a los 18 meses de vida. El compromiso del sistema contra P. carinii determinado por fijación del com­
macrófagos en los espacios intervellositarios e in­ nes de gota gruesa y frotis sanguíneos. Sin embar­ nervioso central es frecuente en esta infección con­ plemento. Posteriormente se describieron tres casos
flamación perivellositaria. go, los eritrocitos infectados pueden no encontrarse génita y en algunos niños puede ser lentamente de RN de término, que desde el periodo neonatal
La malaria congénita puede ocurrir aun en au­ basta que no se establezcan altos niveles de parasi­ progresivo. inmediato presentaron síntomas y signos de com- .·
sencia de evidencias clínicas de malaria en la ma­ temia, por lo cual también es útil el análisis de la El diagnóstico debería ser sospechado en un promiso respiratorio, destacando la cianosis y una
dre, lo que justifica un tratamiento profiláctico en placenta y sangre de cordón. Una técnica más sen­ lactante o RN con fiebre inexplicada, anemia, hepa­ radiografía de tórax que reveló un fino infiltrado
embarazadas de zonas endémicas durante el último sible para la pesquisa de infección congénita es la toesplenomegalia o síntomas neurológicos progresi­ reticular y granular difuso, bilateral, en los
trimestre del embarazo. coloración fluorescente de los plasmodios en frotis vos, cuyas madres vivan o hayan vivido en zonas pulmones.En ellos se descartaron otros agentes in­
La malaria adquirida congénita o perinatalmente, de sangre incubado con anticuerpos antiplasmodios endémicas. El diagnóstico de infección congénita se fecciosos y a pesar de recibir tratamiento antibiótico
no involucra el pasaje de esporozoitos, por lo tanto, (inmunofluorescencia directa) o el análisis cuanti­ establece por el hallazgo del parásito en la sangre o fallecieron a los tres meses, dos meses y tres días de
el ciclo exoeritrocitario no existe. tativo de la capa leucocitaria (QBC-Quick Buffy en el líquido cefalorraquídeo (LCR) del RN, durante edad, respectivamente. El diagnóstico se estableció
Las manifestaciones de la infección malárica, la Coat) por microscopia de fluorescencia. la primera semana de vida. Los parásitos se observan en la autopsia por el hallazgo de quistes de P. carinii
mayoría de las veces, no aparecen en los primeros Los títulos serológicos de anticuerpos con la generalmente en exámenes de gota gruesa y pueden en los alvéolos pulmonares. Los embarazos y partos
tres meses de vida, probablemente debido a los ele­ reacción de inmunofluorescencia indirecta (IFI), estar presentes precozmente en el LCR antes aun de estos casos fueron normales.
vados niveles de hemoglobina fetal y la protección tanto en la madre como en el niño, pueden ser de que en la sangre periférica. En el sur de Irán se comunicó el caso de un
ofrecida por la presencia de anticuerpos maternos. gran utilidad para identificar la especie de plasmo­ En adultos, niveles muy altos de IgM en suero paciente que falleció a los dos días de vida y en
Por eso la extensa destrucción de glóbulos rojos que dios. Los anticuerpos adquiridos pasivamente pue­ son considerados patognomónicos de la tripano­ quien se encontró P. carinii en los pulmones. En
se observa en la malaria en otras fases de la vida es den prolongar el período de incubación de la infec­ somosis en áreas endémicas y la presencia de IgM ninguno de los casos descritos se ha examinado la
excepcional en el RN. ción, pero no la previenen. Los anticuerpos de tipo en LCR tiene carácter diagnóstico. Sin embargo, en placenta, pero se presume la infección congénita por
La hemólisis en la malaria causa elevación de la IgM específicos son de gran utilidad para el diag­ los RN la IgM puede no detectarse en el LCR aunque ló corto del periódo de incubación.
bilirrubina indirecta e ictericia. Como resultado de nóstico, pero desgraciadamente no siempre son los parásitos estén presentes y los niveles de IgM Un niño nacido de una madre con SIDA y que
la destrucción de los eritrocitos hay acentuada ane­ positivos, lo que no invalida el diagnóstico. Los en el suero sean altos. desarrolló una neumonía por P. carinii al cuarto
mia y formación de grandes cantidades de pigmento títulos de anticuerpos han demostrado ser mejores En los niños el tratamiento con suramina o mes de gestación, no presentó infección en el pe­
que es fagocitado por las células del sistema indicadores que la parasitemia. Títulos altos indi­ melarsoprol ha sido comunicado con buenos resul­ ríodo de RN. Otros autores reportaron un RN, VIH
linfoidomacrofágico lo que produc.e·una hepatoes­ can,una importante y reciente o repetida infección. tados; sin embargo,.en un caso de tripanosomosis positivo, con aspiración de meconio y neumonia
plenomegalia. El parasitismo produce aumento de Un bajo peso de nacimiento, una menor edad ges­ congénita, síntomas i'ieuroiógicos severos persistie­ con P. carinii demostrado por biopsia pulmonar
la viscosidad y los glóbulos rojos se fijan en el tacional y un retardo del crecimiento fetal, se han ron después de un diagnóstico y tratamiento tardíos, abierta, a los 19 días de edad. El suero de la madre
a los 22 meses de edad. era VIH negativo y el suero del padre era VIH
s:w PARASITOLOGIA MEDICA TRANSM/S/ON CONGENITA DE PARAS/TOS 521

positivo. Los padres desaparecieron poco después huevos llegan a los espacios intervellosos a través madre con triquinosis no se encontró ninguno in­ ocular en la enfen11edad de Chagas congénita. Rev
del nacimiento del niño y no tuvieron seguimiento, de la sangre venosa migrando contra la corriente fectado. A pesar de esto, en 1916, T. spiralis había Chil Pediatr 1985; 56: 137-41.
pero no tenían historia de neumonía por P. carinii sanguínea a partir de las venas uterinas, al contra­ sido .encontrada en la placenta y en la leche de Bittencourt AL y cols. Congenital Chagas disease. Am J
aunque a la madre la habían notado muy decaída. rio de lo que hacen otros agentes parasitarios, que madres que estaban amamantando al igual que en Dis Child. 1976; 139: 97-103.
Algunos autores comentan que en algunos casos llegan a través de la sangre arterial. el tejido de glándulas mamarias en un estudio rea­ Bittencourt AL y cols. Placenta! involvement in Schista­
la incompetencia inmunológica no es un prerre­ Se han descrito pocos casos de compromiso lizado en un brote de triquinosis. En 1939, Hood y somiasis mansoni. Am J Trop Med Hyg. 1980; 29:
quisito necesario. placentario por S. hematobium y por S. 111a11soni. En O!son encontraron T. spiralis en preparaciones de 571-75.
el primero, los huevos fueron encontrados en la músculo prensado en 4 de 48 niños de O a 12 meses Bittencourt Al y cols. Esophageal involvement in conge­
TRANSMISION CONGENITA DE HELMINTOS placenta del 22,3% de madres que habitaban en de edad. No hay evidencias posteriores a las descri­ nital Chagas disease. Am J Trop Med Hyg. 1984; 33:
regiones hiperendémicas, no encontrándose rela­ tas que informen sobre hallazgos similares. En el 30.
Estudios experimentales en animales han de­ ción alguna con el peso de la placenta, peso del RN, policlínico de parasitología del Hospital San Juan Bittencourt AL. Infec9oes Congenitas Transplacentarias.
mostrado la transmisión congénita de Ancylostoma ni edad gestacional. de Dios se hizo un completo estudio de una mujer Río de Janeiro, Brasil: Ed. Revinter Ltda. 1995.
caninum, Toxocara canis, Dirofilaria immitis, En Brasil se ha descrito el compromiso de la embarazada que a los ocho meses de gestación pre­ Chu W, Chen P, Huang C, Hsu C. Neonatal ascaridiasis.
Dipetalo11e111a viteae y Brugia pahangi. placenta por S. mansoni en cuatro casos, encontran­ sentó una infección aguda por T. spiralis. Se estu­ J Pediatr. 1972; 81: 783-85.
do huevos en los espacios intervellositarios, dentro dió la placenta y al RN durante algunos meses, sin Couvreur J, Desmonts G. Toxoplasmosis. En: Winken
Filariosis de las vellosidades o en la decidua. Raramente se demostrarse infección parasitaria en el niño, ni en PS, Bruyn W. Handbook of Clinical Neurology.
encontraron vermes adultos o esquistosómulas en la leche materna. Arnsterdam: North Holland Publis Co., 1978.
La demostración en animales de experimenta­ espacios intervellositarios y en vasos de la decidua. Daffos F, Forestier F, Capella-Palovsky M, Thulliez P y 'I
ción del pasaje transplacentario de algunas filarias 1
Histológicamente había inflamación alrededor de Toxocarosis y ascariasis cols. Prenatal managemenl of 746 pregnancies al risk
han sugerido esta posibilidad en humanos, por el los huevos con histiocitos, neutrófilos, células epi­ for congenital toxop]asmosis. N Engl J Med. 1988;
hallazgo de microfilarias en sangre periférica en un telioides y, con menos frecuencia, células gigantes, No existirían razones fundamentales para pen­ 318: 271-5.
niño de seis meses de edad. no encontrándose eosinófilos. No hubo evidencia de sar que la posibilidad de infección intrauterina por Davenport M. Neonatal malaria and obstructive jaundice.
El pasaje transplacentario de Wuchereria ban­ infección fetal, a pesar de que tres de ellos fueron Toxocara canis no ocurra en el hombre, tal como Arch Dis Child 1986; 61: 515-7.
crojii ha sido documentado en un estudio de partos mortinatos y el otro falleció a los tres meses de edad. ocurre en los cachorros de perros. Se ha postulado Desmonls G. Toxoplasmose acquise de la fe111111e en ceinle.
en Brasil en el que un 3,2% de las placentas y un Aparentemente, la escasa frecuencia de esquisto­ que las lesiones oculares de la infección por Toxocara Lyon Med 1982; 248: 115-23.
O,7% de las muestras de sangre de cordón, estaban somosis de la placenta estaría relacionada con la podrían corresponder a manifestaciones tardías de la Forestier F, Daffos F, Rainaut M, Desnottes Jf, Gaschard
infectadas, sin demostrarse daño en los niños. En dificultad para el hallazgo dé los huevos por técni­ infección congénita, como se observa con la corio­ JC. Suivi lherapeutique foetomaternel de la spiramy­
todos estos casos, el parto ocurrió durante la noche, cas habituales y requeriría mayor número de cortes rretinitis toxoplásmica. Esta hipótesis se sustenta cine en cours de grossesse. France: Arch Fr Pédintr
cuando la microfilaremia era mayor. También un histológicos u otras técnicas, tales como la diges­ en el hallazgo de anticuerpos antitoxocara en la 1987; 44: 539-44.
caso de pasaje transplacentario de W. bancrojii ha tión artificial con hidróxido de sodio. La presencia sangre de un elevado número de madres de niños Freilij H, Altcheh J, Muchinik G. Perinalal human immu­
sido descrito en un parto, en USA: la madre había de reacciones granulomatosas bien delimitadas y de con toxocariasis ocular. No se han descrito casos nodeficiency virus infection and congenilal Chagas'
vivido en la República Dominicana cinco años an­ carácter focal, principalmente cuando son localiza­ humanos. disease. Pediatr Infect Dis J 1995; 2: 161-63.
tes. La sangre del cordón estaba parasitada, pero la das en la vecindad de la decidua, debe hacer pensar En China, Chu et al., refieren un caso de trans­ Hall Ms. Con genital toxoplasmosis. BMJ 1992; 305: 29 r:
sangre periférica del neonato fue negativa. en esquistosomosis en áreas endémicas y hacer el misión congénita de ascariasis en una madre con 7.
Ocasionalme[Jte, formas crónicas y clínicamen­ diagnóstico diferencial con tuberculosis, enferme­ infección grave. En la superficie materna de la pla­ Howard J. La enfen11edad de Chagas congénita. Santiago:
te silenciosas de W. bancrojii, pueden ser encontra­ dad de Chagas y toxoplasmosis. centa fueron encontrados diez gusanos adultos y el Ediciones Universidad de Chile, 1962.
das en las trompas de Falopio o en los ovarios y Un significativo aumento en hipersensibilidad RN eliminó gusanos y huevos en los primeros días Jeannel D, Niel G, Danis M, Gentilini M. Serodiagnostic
causar esterilidad o dolores abdominales. de tipo retardado a antígenos de S. mansoni ha sido de vida. También se encontraron huevos en el líqui­ de la toxoplasmose evolutive en cours de grossesse el
Se ha dado a conocer la transmisión en el útero descrito en neonatos de madres infectadas. Este do amniótico. No se tuvo el examen de la placenta de la toxoplasmose congenitale. Rev FrGynécol Obstét
de microfilaria de Onchocerca volvulus, en Ghana fenómeno ha sido atribuido a sensibilización in­ en este caso, por lo que no se pudo definir si el 1988; 83: 133-6; 139-44.
y Alto Voila, sin que estuviera relacionada con la trauterina de linfocitos fetales, por circulación de parásito atravesó la placenta o las membranas extra­ Lebech M, Peterscn E. Congenital toxoplasmosis. Scand
densidad parasitaria de la madre. Se sugiere que la antígenos solubles libres o complejos antigénicos placentarias infectando secundariamente el líquido J lnfect Dis 1992.
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li
¡1
encontrados en cortes histológicos de piel durante
los primeros días de vida, cortes posteriores, fueron
sión congénita en esquistosomosis es un estudio en
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nos y los huevos son trasladados a través de anasto­ larvas fueron encontradas en el diafragma de un Alías A, Almonte C. Megaesófago en un lactante con congenitaí Chagas' disease. Am J Trop Med Hyg
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522 PARASITOLOGIA MEDICA
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terráneo, 1988; 7 (4). Patlkhophysiology and Management of the Newbom. del huésped, la condición de éste puede ir desde una Si bien en este tipo de estudios no se exp!oran
O' bonohoe JM, Brueton MJ, Holliman RE. Congenital 2"" ed. Philadelphia: JB Lippincott & Ca., 198 l . situación que permita una eventual mayor carga los mecanismos responsables de la génesis de las
human immunodeficiency virus infection and toxo­ Thiennann E , Alias A . Infección por Toxoplasma gondii parasitaria, hasta la resistencia total a la infección. alteraciones inducidas por las parasitosis, demues­
plasmosis. Pediatr lnfect Dis J 1991; 10: 627-8. en Chile y estimación del riesgo de infección congé­ La interacción entre parásitos y la situación tran con claridad dos aspectos importantes: existen
Pehrson PO, Wahlgren M, Bengtsson E. Intrácranial calci­ nita. Rev Méd Chile 1978; 106: 677-81. nutricional del huésped es parte importante de esta parasitosis capaces de provocar un impacto signifi­
fications probably due to congenital Chagas disease. Thiermann E, Muñoz P, Larca M, Alías A. El estudio de relación, y ha sido considerada significativa desde cativo en la condición nutricional de los individuos
Am J Trap Med Hyg 1982; 31: 419-51. las infecciones congénitas por Toxoplasma gondii y hace mucho tiempo, pero sin conocerse hasta ahora infectados, y estos efectos (o al menos algunos) son
Peyron F, Wallon M, Bemardoux C. Long-term follow­ Trypanosoma cruzi. Rev Chil Pediatr 1985; 56: 143- los mecanismos involucrados en su generación. Es reversibles con el tratamiento.
Up of patients with congenital ocular toxoplasmosis. 50. parte de la sabiduría popular, inclusive, que las Los mecanismos que se han descrito para expli­
personas parasitadas son inapetentes y adelgazan. car este tipo de impacto de los parásitos sobre la
Existen estudios que miden el efecto de las pa­ nutrición son: expoliación directa de nutrientes,
rasitosis en el rendimiento fisico, crecimiento y acción de mediadores. de la respuesta de fase aguda
apetito de niños antes y después del tratamiento e inflamación, interferencia con la absorción y daño
antiparasitario. Un grupo de escolares de Kenya económico.
fuertemente parasitados por Ascaris lumbricoides,
Trichuris trichiura y uncinarias fue tratado con una MECANISMOS DE DAÑO NUTRICIONAL
dosis única de albendazol, demostrándose cuatro EN LAS PARASITOSIS
meses después, en comparación con un grupo con­
trol, mejoría de su capacidad fisica, mayor ganancia Los mecanismos de daño nutricional en la para­
de peso, talla, circunferencia braquial, pliegues sitosis, son múltiples y variados (Tabla 58-1).
cutáneos y apetito. En la India, se encontró en un
estudio de cien niños de entre dos y seis años de Expoliación de nutrientes
edad parasitados por Ascaris lumbricoides, que estos
medían en promedio 2,1 cm menos y su circunfe­ Este es uno de los mecanismos habitualmente
rencia braquial era 0,6 cm menor que en niños no más invocados como causantes de daño nutricional.
parasitados. En otro estudio, realizado también en En algunas situaciones parece claro el hecho de que
la India, se encontró algo similar para el caso de la el parásito es capaz de sustraer nutrientes al hués­
infección por Giardia duodena/is, demostrándose ped, como en el caso de los nematodos intestinales
en un grupo de treinta y cuatro niños de entre dos hematófagos. La cifra promedio de 0,05 mL de
y seis años de edad, que varios de sus parámetros sangre por parásito por día, ha resistido la prueba
antropométricos eran significativamente inferiores del tiempo para estimar el efecto de las uncinariasis
a los de un grupo de niños no parasitados. En un en el ser humano. Esta cantidad, multiplicada por
estudio realizado en niños entre 4 meses y I O años una carga de l.000 vermes, resultaría en la pérdida
.1,.•,,:;.· de edad en Zaire, se documentó un mayor riesgo de diaria de 50 mL de sangre, cifra realmente sign ifi­
retardo de crecimiento en niños infectados por cativa; que puede llevar a anemia severa.
Ascaris lumbricoides, mayor riesgo de peso bajo en Otro ejemplo documentado de este mecanismo
524 PARASITOLOGIA MEDICA NUTRICION Y PARASITOSIS 5 25

TABLA58-1 Se ha demostrado que la inflamación asociada parecen mediados por una disminución en el re­ efecto deletéreo sobre la economía y nutrición de las
a la infección por Trichuris trichiura se asocia a la cambio de los enterocitos, asociado a una disminu­ personas y las comunidades.
MECANISMOS DE DAÑO NUTRICIONAL
inducción de pérdida de proteínas a través de las ción de la infiltración linfocitaria y de la migración
EN PARASITOSIS uniones estrechas de los enterocitos (enteropatia de mastocitos a las vellosidades parasitarias. Tene­
perdedo_!"a de proteínas) y a aumento de la per­ mos, entonces, que al menos experimentalmente la BIBLIOGRAFIA
Mecanismos Ejemplo
meabilidad del intestino delgado al paso de molécu­ giardiasis es capaz de provocar trastornos nutricio­
las intactas, lo que puede tener efectos deletéreos nales, los que a su vez permiten una mayor acción Buret A, Gal! DG, Olson ME. Effects of murine giardiasis
Expoliación de nutrientes Anquilostomosis patogénica del protozoo. on growth, intestinal morphology, and disaccharadise
para el huésped. Este último efecto parece estar
Mediadores de fase aguda Tricocefalosis mediado por algún factor circulante, ya que el há­ Se han realizado también estudios sobre absor­ activity. J Parasitol 1990; 76:403-09,
Interferencia con absorción Giardiasis bitat del parásito es el intestino grueso. Estos ha­ ción en el caso de infecciones por nematodos, de­ Cooper ES, Whyte-Alleng CAM, Finzi-Smith JS, Mac
Daño económico Malaria llazgos, más la documentación de hipoalbuminemia, mostrándose que la infección experimental de ca­ Donald T. Intestinal nematode infections in children:
inversión del índice albúmina/globulina, aumento chorros por Toxocara canis induce malabsorción de the pathophysiological price paid. Parasitology 1992;
de la alfa-1-antitripsina y elevación moderada de la xilosa y grasas, En el ser humano se ha invocado l 04:S91-S 103,
Proteína C Reactiva, son otras evidencias de una que Ascaris /umbricoides sería capaz de provocar Ettling MB, Shepard DS, Economic cost of malaria in
respuesta sistémica a· la tricocefalosis, lo que es intolerancia a lactosa, atrofia vellositaria y malab­ Rwanda, Trop Med Parasitol 1_991; 42: 198.
es el de Dyphyllobothrium /atum, parásito compe­ probable que ocurra también en otras helmintiasis sorción, pero esta aún es una información conflic­ Gopaldas T. More nutrients, fewer parasites, better
tidor del huésped porla absorción de Vitamina B 12 intestinales. tiva. leaming. World Health Forum 1996; 17: 367-8,
a nivel del íleon. Este platelminto posee una parti­ Además, se ha encontrado asociación entre Gupta MC, Effect of ascariasis upon nutritional status of
cular avidez por la cianocobolamina, estando des­ tricocefalosis y disminución de los niveles plasmá­ DAÑO ECONÓMICO children, J Trop Pediatr 1990; 36:189-91.
crita la ocurrencia de anemia megaloblástica en ticos de zinc, los que se correlacionarían inversa­ Gupta MC. Effect of Giardia infection on nutritional
pacientes parasitados. La importancia epidemioló­ mente a la carga parasitaria. Dado que el déficit de Las infecciones parasitarias suelen afectar con status of preschool children, Indian J Med Res 1990;
gica de esta condición es más bien limitada en zinc se asocia con un menor crecimiento en talla de mayor frecuencia a las comunidades más deprivadas 92:341-3.
nuestro medio, dada la baja frecuencia de esta pa­ los niños, éste sería otro mecanismo de daño nutri­ del mundo, imponiendo una carga económica difi­ Leitch GJ, Udezulu IA, Visvesvara S, Effects of protein
rasitosis. cional inducido por un parásito. cil de sobrellevar en el ámbito individual y colecti­ malnutrition on experimental giardiasis in the Mongo­
Se ha citado también que la síntesis de masa vo, En el caso de la malaria, por ejemplo, los días lian Gerbil. Scand J Gastroenterol 1993; 28:885-93.
pafl!Sitaria, para lo cual son utilizados nutrientes del Interferencia con la absorción de nutrientes no trabajados por enfermedad, el mayor costo ener­ Lloyd S, Wijesundera MK, Soulsby EJ. Intestinal changes
huésped, sería importante como mecanismo de gético de las crisis febriles y la mortalidad prema­ in puppies infected with toxocara canis, J Comp Pathol
depleción nutricional. Sin embargo, dado el tamaño El ejemplo' clásico de mal absorción inducida tura, constituyen una parte del problema. Los fon­ 1991; 105: 93-104.
y peso de las especies que parasitan al ser humano, por parasitosis es el de la infección por Giardia dos públicos destinados a la lucha contra esta enfer­ Stephenson LS, Latham MC, Adams EJ, Kinoti Pertet A.
esto no parece tan evidente. Como ejemplo se puede duodena/is. Se-ha demostrado que la infección agu­ medad, por otra parte, deben ser restados a los re­ Physical fitness, growth andappetite ofKenyan school
citar el caso de Trichuris trichiura: cada individuo da por este protozoo puede provocar cambios en­ cursos ya limitados de los países afectados, En boys with hookworm, Triclmris trichiura and Ascaris
de esta especie pesa aproximadamente 1O mg, por lo zimáticos, histológicos y ultraestructurales en el Ruanda, el costo directo por caso representa el 160% lambricoides infections are improved four months
que una población parasitaria de LOOO vermes, es intestino delgado. En un modelo experimental de del presupuesto anual por persona del Ministerio de after a single dose of albendazole. J Nutr 1993';
suficiente para causar síntomas de enfermedad, re­ infección por Giardia muris en ratones jóvenes, en Salud, y se estima que en 1995 la malaria en esa 123:1036-46.
presentaría no más de 1O g de masa parasitaria, cifra fase de crecimiento, se ha encontrado clara dismi­ nación representaría una carga del 2,4% del Pro­ Tshikuka JG, Gray-Donald K, Scott Olela KN. Relation­
poco significativa en el caso de un individuo que nución de la ingesta voluntaria de alimento por ducto Geográfico Bruto. Este aspecto del daño cau­ ship of childhood protein-energy malnutrition and
pesa algunas decenas de kilogramos. parte de los animales infectados, acompañado de sado por las parasitosis no se considera siempre, parasitic infections in an urban Afiican setting. Trop
menor ganancia de peso. Los efectos descritos se pero no debe ser olvidado, ya que contribuye a su Med Int Health 1997; 2:374-82,
Mediadores de la respuesta de fase aguda asociaron a disminución de la altura de las
e inflamación vellosidades intestinales y a disminución de la ac­
tividad de la sacarasa y maltasa del ribete en cepillo.
Es conocido que entre los efectos de los interme­ La disminución de altura de las vellosidades fue
diarios de la respuesta de fase aguda (ej.: Interleuci­ observada no solamente en los lugares en que hubo
na-1, Factor de Necrosis Tumoral Alfa) se encuen­ contacto fisico del parásito con la mucosa, sino
tran la anorexia, el aumento de la síntesis de también en sitios distantes, lo que sugiere el efecto
colagenasa por parte de los fibroblastos, caquexia, de algún mediador. El efecto combinado de dismi­
inflamación local e inhibición de la liberación de nución de la ingesta, atrofia vellositaria y déficit de
hormona de crecimiento por parte de la hipófisis. Se enzimas, resultan en retraso del crecimiento en un
ha documentado el aumento de síntesis de citocinas modelo animal,
en algunas infecciones parasitarias, las que podrian Por otra parte, se ha demostrado que la infección
entonces ser en parte responsables de algunos efec­ por Giardia duodena/is en una especie de roedor
tos nutricionales de las mismas, como en el caso de (Meriones unguiculatus) experimentalmente des­
la tricocefalosis, en el que se ha observado deten­ nutrido previamente a la inoculación de los quistes,
ción del crecimiento longitudinal en relación a episo­ determina una infección que induce en el animal
dios de disenteria, los que han sido seguidos de mayor pérdida de peso, pérdida de grasa fecal y
periodos de crecimiento acelerado postratamiento. duración de excreción de quistes, Estos efectos
Capítulo 59 PARASITOLOGIA MEDICA INMUNOSUPRESION Y PARASITOSIS 527

INMUNOSUPRESION Y PARASITOSIS En los pacientes comprometidos inmunológicos


pueden ocurrir dos cuadros: el primero al adquirir
como: en tratamientos inmunosupresores (trasplan­
tados), en terapias anticancerosas (especialmente
JUAN CARLOS WEITZ y la infección estando bajo tratamiento inmunosu­ hematológicas) y en el SIDA. Estos pacientes, en
presor· como en los trasplantados, produciéndose general, son chagásicos crónicos cuya enfermedad
ANTONIO ATIAS una toxoplasmosis aguda severa que se manifiesta se reactiva y, en menor proporción, son agudos,
en forma generalizada o con hepatitis, encefalitis, Juego de adquirir esta infección por transfusión o
meningoencefalitis, miocarditis, pericarditis, etc. El por trasplante.
segundo cuadro, y el más frecuente, es una reacti­ El inmunocomprometido que adquiere la infec­
vación de la toxoplasmosis que se puede presentar ción vía transfusión presenta un síndrome febril
En el paciente inmunocomprometido las afeccio­ con compromiso ocular (corioretinitis), miocardi­ prolongado, con compromiso del estado general y
escasa expectoración (25% de los casos). En el SIDA meningoencefalitis. En los trasplantados, ya sea por
nes parasitarias suelen adquirir caracteristicas de el pródromo es más largo y la evolución más larvada tis, neumonitis, encefalitis toxoplásmica (manifes­
mayor gravedad que en el hospedero normal, pue­ tación más frecuente, especialmente en los SIDA) Y reactivación de su enfermedad o por la adquisición
e incluso un porcentaje menor del 10% puede ser en el órgano trasplantado, presentan una incuba­
den presentar cuadros diferentes de lo habitual y se asintomático. Al examen pulmonar existe escasa cuadros generalizados (poco frecuentes) y muy rara
han descrito en ellos nuevos agentes, especialmente vez, compromiso ganglionar. ción de 30 ó más días y el cuadro clínico se carac­
signología como estertores finos y roncus en un teriza por fiebre prolongada heptoesplenomegalia,
en los pacientes con el síndrome de inmunodeficien­ 40% de los casos, por lo que un examen normal no El cuadro clínico de la toxoplasmosis cerebral
cia adquirida (SIDA). no es específico y depende del número, localización en ocasiones ictericia, y rara vez, miocarditis y me­
descarta esta patología. En algunos casos se han ningoencefalitis de curso severo.
La inmunosupresión es una de las consecuen­ descrito neumocistosis extrapulmonares, las que, en y tamaño de las lesiones. El comienzo suele ser
cias de factores genéticos, constitucionales, nutri­ subagudo y algunos pacientes cursan con fiebre, Especial mención merece la reactivación de la
general, corresponden a SIDA y han afectado enfermedad de Chagas en los pacientes con SIDA,
cionales, de enfermedades consuntivas o neoplási­ tiroides, bazo, piel, músculos, etcétera. adenopatías y los signos neurológicos pueden ser
cas, de administración de fármacos como esteroides locales difusos o mixtos. Las alteraciones locales en quienes se describe mayoritariamente compro­
En el estudio radiológico, el hallazgo más fre­ miso de SNC caracterizado por signos y síntomas
o antineoplásicos y, últimamente, del SIDA. cuente es el infiltrado difuso bilateral intersticial que más fr�cuentes son hemiparesias y convulsiones, y
En este capítulo se abordarán algunas de las luego afasia, alteraciones visuales, parálisis de ner­ que corresponden a una lesión focal que ocupa es­
al inicio es biliar y que luego progresa hacia la peri­ pacio en cerebro, hasta una meningoencefalitis di­
parasitosis de relevancia relacionadas con la inmu­ feria. Aproximadamente en el 30% de los casos, la vios craneales, trastornos de la motilidad y dismetría.
nosupresión, aunque en parte ya han sido expuestas Entre las alteraciones difusas destacan la cefalea, fusa esta última más rara. Dentro de los otros com­
radiografía es atípica con infiltrados asimétricos, pro�ísos se han publicado algunos casos de mio­
en capítulos correspondientes. periféricos o unilaterales, o infiltrados localizados. confusión y el letargo que puede llegar al coma Y en
menor proporción, a trastornos de conducta. carditis chagásica.
También se describen consolidaciones lobares o
NEUMOCISTOSIS En el diagnóstico se utiliza la TAC que es un En los países endémicos los pacientes VIH de­
segmentarias, e incluso, de ubicación apical lo que ben estudiarse en el momento del diagnóstico de su
simula una tuberculosis. En forma ocasional, se pre­ procedimiento muy sensible para l_a detección de
La neumonía por Pneumocystis carinii se ha lesiones focales cerebrales; en ocas10nes, se puede enfermedad de base, teniendo presente a la enfer­
sentan nódulos pulmonares solitarios, e incluso, medad de Chagas en el diagnóstico diferencial de
descrito en un gran número de patologías que lesiones caviladas. Signos de neumotórax se han emplear la resonancia nuclear magnética de ma7�r
implican compromiso inmunológico, como: neoplá­ sensibiliadad que la anterior. Las pruebas serolog1- las afecciones encefálicas.
descrito con mayor frecuencia en SIDA y pueden Si bien el diagnóstico de esta parasitosis es simi­
sicas (especialmente hematológicas), trasplantes existir pequeños derrames pleurales. Generalmente, cas para toxoplasmosis, deben ser interpretad�s
de órganos (riñón, corazón, corazón-pulmones, cuidadosamente. En general, los resultados negali­ lar a la del inmunocompetente, en los imnunocom-··
los casos de presentación más raros corresponden prometidos debe plantearse a veces un manejo más
etc.), tratamientos esteroidales, desnutrición y en a SIDA y en muchos de ellos se utiliza pentamidina vos descartan esta afección y ante cualquier título
el SIDA. Recientemente se han descrito casos de positivo más lesiones focales en. cerebro, se d ?e agresivo, como, por ejemplo, la biopsia cerebral en
en inhalación como profilaxis secundaria. 7 caso de lesión focal.
neumonía en individuos que no poseen algunas La recurrencia de la infección así como la presen­ iniciar tratamiento antitoxoplásm1co. La evaluac1on
de las características mencionadas y, además, se clínica debe ser muy estricta, por la posibilidad de El tratamiento es similar al descrito en el capí­
tación extrapulmonar es lejos más frecuente en los tulo correspondiente y existe un vacío en la profi­
han comunicado brotes de neumocistosis en pa­ SIDA que en lo no SIDA. que se trate de patologías con similares imágenes al
cientes hospitalizados. Todos estos antecedentes TAC como la enfermedad de Chagas, especialmen­ laxis primaria o secundaría de esta parasitosis, es­
El diagnóstico de esta infección se basa en el pecialmente en los pacientes con SIDA.
han llevado a estudiar mejor las características hallazgo del agente, especialmente quistes de P. te en países endémicos. La complementación con la
epidemiológicas de esta infección, las que al igual carinii en las secreciones respiratorias, utilizando punción de LCR es de utilidad, fundamentalmente
que su taxonomía, están en revisión. (Capítulo 30: para descartar otras etiologías; y la biopsia cerebral CRIPTOSPORIDIOSIS
tinciones simples como azul de toluidina, más com­
Neumocitosis). plejas como metamino-argéntica y técnicas como IFI es de gran ayuda especialmente si no existe evolu­
Dentro de las patologías mencionadas, el SIDA ción favorable en un paciente en tratamiento o ante C1yptosporidiu111 parvum provoca diarrea agu­
con anticuerpos monoclonales y PCR. da autolimitada en el paciente inmunológicamente
constituye la principal condición para esta infección El tratamiento de elección es con trimetoprim­ imágenes atípicas.
y si bien es un marcador important e de este El tratamiento sigue siendo la combinación de normal y diarrea crónica severa como principal sín­
sulfametoxazol. toma en los inmunocomprometidos. Se le ha descri­
inmunocompromiso, con el manejo adecuado en pirimetamina y sulfadiazina, aunque existen o_tras
profilaxis primarias y secundarías, la prevalencia de alternativas descritas en el capítulo correspondien­ to en una gran variedad de pacientes: neoplásicos,
TOXOPLASMOSIS
la neumocistosis se ha reducido y su evolución ha te. Se debe recordar que se debe mantener con tra­ trasplantados, con corticoterapia, inmunodeficien­
mejorado considerablemente con los esquemas de tamiento profiláctico secundario a los pacientes con cias congénitas y, especialmente, en el SIDA. La
La toxoplasmosis es de importancia en los inmu­ prevalencia en pacientes con SIDA y diarrea cróni­
tratamientos usados en la actualidad. nocomprometidos, especialmente en las terapias SIDA, pues la tendencia a la reactivación es alta.
El cuadro clínico de la neumocistosis es muy ca es muy variable: en USA se llega al 15%; en el
inmunosupresoras: pacientes con cáncer (linfomas resto de América las frecuencia más alta es la de
variable y en los inmunocompromisos no SIDA tien­ Hodgkin y no Hodgkin, leucemias, etc.), trasplanta­ ENFERMEDAD DE CHAGAS
de a ser más agudo y manifiesto que en el SIDA, con Haití con un 42%; en Europa cifras promedio del_
dos y, en la décadá'del 80, se agregó a este grupo �l. 6 iil en Africa hasta un 48% alcanzado en Uganda.
fiebre, calosfríos, tos, taquipnea, dolor torácico y SIDA. La enfermedad de Chagas se presenta clínica­
mente en distintos tipos de inmunocompromiso, ' EÍ cuadr9 clínico se caracteriza por una diarrea
528 PARASITOlOGIA MEDICA INMUNOSUPRESION Y PARAS!TOS!S 529

acuosa profusa ( 1 a 3 litros al día), acompañada de dolor abdominal cólico difuso y diarrea crónica ha descrito aparición de leishmaniosis cutánea di­ importante por su frecuencia es el compromiso di­
dolor abdominal cólico, meteorismo, anorexia, baja severa acompañada de malabsorción. fusa, leishmaniosis de ubicación poco frecuente gestivo causado por Enterocytozoon bieneusi y
de peso y compromiso del estado general. Más oca­ Isosporosis extraintestinal se ha descrito en una (pulmonar, digestivo, SNC) y lo más importante, la Encephalitozoon intestina/is en pacientes con
sionalmente se presentan naúseas, vómitos y mial­ oportunidad en una diseminación en SIDA y, re­ tendencia a la recidiva a pesar de tratamientos bien SIDA, provocando una diarrea crónica severa simi­
gias. La diarrea y el dolor abdominal se exacerba cientemente, se han publicado casos de colangiopatia controlados. lar a la descrita para Cryptosporidium parvum e
con la ingesta de alimentos. La criptosporidiosis se del SIDA relacionados con lsospora belli en vía · El diagnóstico se basa principalmente en el ha­ Jsospora belli, protozoos a los cuales se puede aso­
puede iniciar en forma insidiosa y, posteriormente, biliar. llazgo de la Leishmania en los tejidos mediante ciar dando un pésimo pronóstico al cuadro. Junto
tener una evolución intermitente, ello de acuerdo El diagnóstico se basa en el hallazgo de ooquis­ exámenes directos, cultivos y, recientemente, con con ellos, además están .involucrados en la
con la evolución del daño inmunológico. tes de L belli en las deposiciones mediante el exa­ técnicas de bajo costo como la Ieucocitoconcen­ colangiopatía del SIDA.
En los inmunocomprometidos, especialmente men parasitológico seriado de deposiciones o en tración. Los métodos diagnósticos que se aplican depen­
con SIDA, la criptosporidiosis puede comprometer frotis teñidos con Ziehl Neelsen. El tratamiento se basa en fármacos antimoniales derán del compromiso correspondiente. En el caso
otros sistemas como el aparato respiratorio, afec­ El fármaco de elección es el trimetoprim sulfame­ pentavalentes que debe ser seguidos por profilaxis ocular, por ejemplo, se utilizará raspado cornea!,
tando los senos paranasales, el árbol bronquial e toxazol, el que debe mantenerse posteriormente como secundarias mensuales con iguales fármacos. biopsias y técnicas como IFI con anticuerpos mono­
incluso, el pulmón. En el aparato digestivo se le ha profilaxis secundaria, especialmente en SIDA. clonales y en los pacientes con diarrea, visualizar al
descrito en páncreas y en el árbol biliar, en donde AMIBIASIS agente en las deposiciones por tinciones de frotis de
en conjunto con otros agentes infecciosos se le ha ESTRONGILOIDOSIS heces o con técnicas más costosas como PCR o
visto involucrada en la colangiopatía del SIDA, Los estudios más importantes sobre prevalencia anticuerpos monoclonales.
cuya máxima expresión es la colangitis esclerosante. El Strongyloides stercoralis es un nematodo de de amibiasis se han realizado en pacientes con SIDA, El tratamiento de la microsporidiosis es dificil. En
La gran mayoría de los pacientes con criptospo­ alta prevalencia mundial y cuya sintomatología, en observando similares cifras a las de la población ge­ los casos oculares se ha empleado aplicaciones tó­
ridiosis extraintestinal tiene diarrea crónica conco­ general, es de relativa poca importancia. En pacien­ neral. Su cuadro clínico de diarrea aguda o intermi­ picas de fumagilina y en los casos generalizados o
mitante. Los pacientes con multiparasitismo, Cryp­ tes con compromiso inmunológico, no está claro si tente es de similares caracteristicas y la respuesta al intestinales por E. intestina/is, se han logrado bue­
tosporidium e lsospora y, más recientemente, mi­ celular o humoral, se produce un síndrome de metronidazol o tinidazol es buena. En la actualidad nos resultados con albendazol; en cambio, en infec­
crosporidios, tienen un muy mal pronóstico. hiperinfección con gran proliferación de estos ne­ no se considera una parasitosis problemátic a en el ciones por E. bieneusi los resultados han sido poco-
El diagnóstico de esta parasitosis se efectúa con matodos en intestino y posterior penetración en la SIDA ni en los otros inmunocornpromisos y debe ser satisfactorios.
el hallazgo del ooquistes de Cryptosporidium en los mucosa con diseminación por los tejidos. Se produ­ estudiada y manejada como en pacientes inmuno­
frotis de deposición teñidos con Ziehl Neelsen o ce compromiso pulmonar parasitario, y complica­ competentes. Quizás el desafio mayor será poder dis­ CICLOSPOROSIS
Safranina. Existen otras técnicas corno la Inmu­ ciones bacterianas secundarias como septicemia, tinguir si es Entamoeba histolytica o E. dispar la
nofluorescencia (directa e indirecta) con anticuer­ neumonía y meningitis (por el arrastre de bacterias que mayormente afecta estas poblaciones, pues aún Cyclospora cayetanensis es un protozoo recien­
pos monoclonales y ELISA que detecta antígenos por el nematodo), constituyéndose en un cuadro estos estudios de especie no se han efectuado. temente descrito en el humano, de similares carac­
de C1yptosporidi11111, que se detallan en el capítulo grave de alta mortalidad. En el SIDA, si bien se han terísticas que Cryptosporidium parvum, pero de ma­
correspondiente. Se recomienda realizar este estu­ descrito casos diseminados muy graves, en las re­ GIARDIASIS yor tamaño. Se tiñe con tinciones como Ziehl
dio en form a seriada y repetida en caso de ser nega­ giones de alta prevalencia este tipo de presentación N eelsen (enfrío, preferentemente) y tiene l a parti­
tivo y, posteriormente, se puede complementar con es rara y, en general, es similar al inmunocompe­ En los pacientes inmunocomprometidos, Giar­ cularidad de poseer autofluorescencia al microsco- ··
biopsia intestinal, que es el paso a seguir cuando no tente, e incluso, en algunas de estas regiones como dia duodena/is es capaz de provocar diarrea crónica, pio de luz ultravioleta. Se le ha descrito principal­
existe etiología de la diarrea crónica. Estas biopsias Brasil y Centro América, las prevalencias son simi­ en algunos casos severa, acompañada de dolor ab­ mente en pacientes con diarrea aguda, anteceden­
deben procesarse por técnicas habituales como la lares que en los controles. dominal difuso, meteorismo y náuseas. tes de viajes al extranjero y en el SIDA. En el
hematoxilina eosina, pues el Ziehl Neelsen en estos Al igual que la amibiasis, en el SIDA esta inmunocompetente la duración de la infección es
El diagnóstico se basa en encontrar larvas de S. ·t
casos no tiene buen rendimiento. stercoralis en deposiciones, contenido gastroduo­ protozoosis no tiene diferencias respecto de los variable y en el SIDA se desconoce por el escaso
El tratamiento de esta parasitosis es dificil, pues denal, expectoración, orina y LCR. pacientes inmunocompetentes y sus prevalencias número de pacientes bien estudiados y no se sabe
se han ensayado múltiples fármacos con mala res­ Los fármacos más empleados son tiabendazol, son similares. El diagnóstico y el tratamiento son si sufren de cuadros más graves o prolongados.
puesta y, últimamente, han sido promisorios el uso albendazol y, últimamente, ivermectina. La preven­ iguales que en la población general. Existe sólo un trabajo que estudia un número im­
de paromomicina y el de calostro bovino, únicas ción es posible al estudiar al paciente de zona endé­ portante de pacientes con SIDA y diarrea crónica,
herramientas terapeúticas con una aceptable res­ mica antes de someterlo a tratamiento inmunosu­ MICROSPORIDIOSIS encontrando u n a frecuenci a de 11 % de
puesta clínica en más de la mitad de los casos. ciclosporosis versus 12% de isosporosis y 30% de
presor.
De acuerdo al capítulo correspondiente, los criptosporidiosis. Esta publicación demuestra que
ISOSPOROSIS LEISHMANIOSIS microsporidios son un grupo de protozoos que se el estudio de este agente debe ser incorporado en el
han descrito afectando al hombre recientemente. En diagnóstico de la diarrea del paciente con SIDA.
La isosporosis en el inmunocompetente provoca general, los casos publicados corresponden a Su diagnóstico se basa en la lectura de frotis de
La Ieishmaniosis visceral se ha observado en
diarrea aguda de duración variable y, en general, de pacientes inmunocoprometidos produciendo fiebre, inmunocomprometidos y una minoría de competen­ deposición teñidas con Ziehl Neelsen y el tratamien­
evolución autolimitada. En los inmunocomprome­ baja de peso , leucopenia y hepatoesplenomegalia. tes inmunológicos, las especies comprometidas son to propuesto es mediante trimetoprim sulfametoxazol.
tidos causa diarrea crónica similar a la descrita en Ultimamente en los países mediterráneos, especial­ v arias e incluso se han seguido describiendo nue­
criptosporidiosis, y si bien se presenta en pacientes mente España, Italia y Francia, se han descrito más vas, especialmente en pacientes con SIDA. Estos
no SIDA, su importancia es poco conocida; en cam­ de 500 casos de Ieishmaniosis en SIDA, en los que parásitos son capaces de provocar diversos cua­ BH3LIOGRAFIA
bio, en el SIDA se han publicado cifras de hasta el .Jtl, observan similares síntomas que en los in.muna­ dros, según la especie, y los más rel1,y.a;ntes son:
16% en pacientes con diarrea crónica. La sintoma­ .· competentes como hipérgamúmglobulinemia, fie­ queratitis, meningoencefalitis, miositis, hepatitis, Alvar Ú�ishmiiil�sis and AIDS co-infectio�iíhe spanish
tología de estos casos se caracteriza por náuseas, bre, esplenomegalia y leucopenia; pero, adetnás, se diarrea crónica, cuadros generalizados, etc. Lo más example. Parasitol Today 1994, 10:160-3.
53Q PARAS/TOLOGIA MEDICA Capítulo 60
1 .·�1
¡i
!
!
Bartelsman J, Sars P, Tytgat G. Gastrointestinal complica­
tions in patients with acquired immunodeliciency
Luft B, Hafner R, Korzun A y cols. Toxoplasmic encephali­
tis in patients with the acquired immunodeficiency SINDROME INFECCIOSO Y PARASITOSIS
syndrome. Sean J Gastroenterol 1989; 24 ( supp syndrome. N Engl J Med 1993; 329:995-1000.
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Benhamou Y, Caumes E, Gerosa Y y cols. AIDS related a new protozoan pathogen of humans. N Engl J Med
cholangiopathy, Critica! analysis of a prospective se­ 1993; 328:1308-12.
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Benator D, French A, Beaudet D, Levy C, Orenstein J. Cyc/ospora infection in adults infected with HIV.
Jsospora belli infection associated with acalculous Clinical manifestations, treatment and prophylaxis.
cholecystitis in a patient with AIDS. Ann Intem Med Ann Intem Med 1994; 121:654-7. La causa más frecuente de fiebre es el síndrome En las amibiasis hepáticas, la fiebre es un signo
1994; 121:663-4. Renold C, Sugar A, Chave J y cols. Toxoplasma encepha­ infeccioso. Sin embargo, existe una extensa gama de importante. Alcanza magnitudes variables desde
Bryan R, Cali A, Owen R, Spencer H. Microsporidia: litis. Medicine 1992; 71:224-38. etiologías no infecciosas caracterizadas por una febriculas hasta temperaturas muy elevadas y mante­
opportunistic pathogens in patients with AIDS. Ribera E, Ocaña I, Otero J y cols. Prophylaxis of visceral evolución febril, siendo las más comunes los proce­ nidas, propias del absceso agudo. En el absceso bien
Progress in clinical parasitology. Philadelphia: Ed leishmaniasis in human immunodeliciency virus sos neoplásicos y otros estados de hipersensibili­ constituido, la fiebre es tan importante como los otros
Sun T. Field & Wood 1991:1-26. infected patients. Am J Med 1996; 100:496-50 l. dad, cuyo análisis sobrepasarla los límites de este signos y sintomas de este estado: la hepatomegalia
Current W, Garcia L. Cryptosporidiosis. Clin Microbio! Rocha A, Ferreira M, Nishioka S y cols. T1Jpanosoma estudio. dolorosa y la leucocitosis. Habitualmente, es mante­
Rev 1991; 4:325-58. cruzi meningoencephalitis and myocarditis ina patient En las infecciones producidas por bacterias, por nida y prolongada y, cuando se agrega una infección.
De Hovitz J, Pape J, Boncy M, Johnson W. Clinical with acquired immunodeficiency syndrome. Rev Inst rickettsias o por virus, la fiebre suele constituir su bacteriana, con mayor razón la fiebre alcanza niveles
manifestations and therapy os Jsospora bel/i infection Med Trop Sao Paulo 1993: 35:205-8. signo fundamental, por lo cual el médico está obliga­ más elevados y mantenidos. Sin embargo, el absceso
in patients with the acquired immunodeliciency Scaglia M, Malfitano A, Douville H y cols.Dermonodular hepático amibiano se puede presentar sin estas carac­
do, como primer paso, a investigarlas en la mayoria
syndrome. N Engl J Med 1986; 315:87-90. and visceral leishmaniasis due to Leishmania i11Jant11111 de los enfennos febriles. Por el contrario, es casi una teristicas tan bizarras; en estos casos, se trata de un
Didier E, Orenstein J, Aldras, Bertucci D y cols. with a new isozyme pattem: report of a case involving regla que muchas parasitosis se desarrollen en fonna paciente de aspecto intoxicado con dolor espontáneo
Comparison of three staining methods far detecting a patient with AIDS. Clin Infect Dis 1996; 22:376-7. solapada, crónica y sin fiebre. Sin embargo, existe un en el hipocondrio derecho o cuando se le comprime la
microsporidia in fluids. J Clin Microbio! 1995; Sepkowitz K.Pneumocystis carinii pneumonía in patients grupo de parasitosis capaces de inducir un síndrome parrilla costal, con o sin hígado palpable y con
33:3138-45. without AIDS. Clin Infect Dis 1993; 17 (Supp 29): infeccioso febril que podria constituir un problema febriculas que, en ocasiones, es menester buscar
Genta R. Dysregulation of strongyloidiasis: a new S41 -22. clínico de diagnóstico diferencial con el de otras intencionalmente. En estas circunstancias el diagnós­
hy¡Jothesis. Clin Microbio! Rev 1992; 5:345-55. Smith P, Quinn T, Stober W y cols. Gastrointestinal tico es dificil y se debe solicitarexámenes complemen­
etiologías.
Israelski D, Remington J. Toxoplasmosis in patients with infectios in AIDS. Ann Intem Med 1992; 116:63-77. Las enteroparasitosis no producen estados fe­ tarios ( ecotomografia, TAC, etc.).('/éase el Capítulo
cancer Clin Infect Dis 1993; 17 (Supp 2 ):S423-35. Soave R, Johnson W. CfJplosporidium and Jsospora belli briles, con excepción de algunas fonnas de amibiasis 8: Amibiasis), o bien se puede recurrir a la prueba
Genta R, Miles P, Fields K. Opportunistic Strongy/oides infections. J Infect Dis 1988; 157:225-9. y de la isosporosis. En cambio, en las parasitosis de terapéutica con emetina o derivados nitroimidazólicos:
stercoralis infection in lymphoma patients. Report of Solari A, Saavedra H, Sepulveda C y cols. Successful si cesa la fiebre o las febriculas, es muy probable que
los tejidos y de la sangre, es más frecuente la presen­
a case and review of literature.Cancer 1989; 63:1407.- treatment of TIJ•panosoma cruzi encephalitis in a cia de fiebre. En la Tabla 60-1 se resumen las princi­ el diagnóstico de amibiasis hepática haya sido corree- .·
11. patient with hemophilia and AIDS. Clin Infect Dis pales infecciones parasitarias, en cuyo curso apare­ to.
Heath T, Rimington S, Garsia R, Macleod C. Systemic 1993; 16:255-9. ce la fiebre como un signo relevante.
strongyloidiasis complicating HIV: a promising Souza R, Mangini A, Torres D y cols. Ocurrencia de Isosporosis, criptosporidiosis, ciclosporosis
response to ivermectin. lntemational Joumal of STD Strongyloides stercora/is em pacientes portadores da PROTOZOOSIS y sarcosistosis
& AIDS 1996; 7:296- 6. sindrome de imnuodeliciencia adquirida (AIDS ). Rev
Joste N, Rich J, Busam K,·Schwartz D. Autopsy verifi­ lnst Med Trop S Paulo 1992; 34:15-7. Amibiasis En el individuo inmunocompetente es frecuente
cation of EncephalitozoÓii .(11testi11alis (Microspori­ Varthalitis Y, Aoun M, Daneau D, Meunier F. Pneumo­ el comienzo con diarrea y con fiebre de 37,5 a 38ºC.
diosis) eradication followinÍ(albendazole therapy. cystis carinii pneumonía in patients with cancer. En dos circunstancias puede aparecer fiebre en Sin embargo, este estado febril es fugaz, no dura más
Arch Pathol Lab Med 1996; 120:19§:203. Cancer 1993; 71:482 -5 la amibiasis: algunos casos de disenteria y en las de dos o tres días y, entonces, se acentúa la diarrea
Kennedy C, Bidwell M. Atypical roentgenographic Weber R, Bryan R, Owen R y cols. lmproved light localizaciones extraintestinales, espec_ialmente la de carácter lientérico y autolimitada.
manifestations of Pneumocystis carinii pneumonía. microscopical detection of microsporidia spores in hepática. En cambio, en los pacientes inmunocomprometi­
Arch lntem Med 1992; 152:1390-8. stool and duodenal aspirated. N Engl J Med 1992; La fiebre es uno de los signos que se deben dos, especialmente en los enfennos con SIDA, estas
Kohl S, Pickering L, Frankel L, Yaeger R. Reactivation of 326:161-5. considerar para el diagnóstico diferencial entre la infecciones adquieren una dimensión tal, que con
Chagas' disease during therapy of acute lymphocitic Weitz Je, Botehlo R, Bryan R. Microsporidiosis en pa­ disenteria bacilar y la amibiana, puesto que la pre­ frecuencia ayudan o precipitan a la muerte. En estos
leukemia. Cancer J 982; 50:827-8. cientes con diarrea crónica y SIDA, HIV asintomáti­ sencia de un síndrome febril acentuado es de regla casos, junto a la diarrea pertinaz, se presenta fiebre
Leiguarda R, Roncoroni A, Taratuto A y cols. Acute CNS cos y pacientes con diarrea aguda. Rev Med Chile en la primera de ellas. Sin embargo, en la disenteria prolongada y de magnitud variable. ('léase el Capí­
infection by Trypanosoma cruzi ( Chagas' disease ) in l 995;123:849-56. amibiana también suele haber fiebre (37,5-38 ºC) sin tulo 59: Inm11nos11presión y parasitosis).
immunosuppressed patients. Neurology 1990; 40: 850- Wurtz R. Cyc/ospora: a newly identilied intestinal alcanzar las alzas propias de las colitis de origen
1. pathogen of humans. Clin Infect Dis 1994; 18: 620-3. bacteriano. Cuando las lesiones amibianas se pro­ Malaria
fundizan en las capas intestinales y llegan a compro­
meter la serosa, cambian las caracteristicas del cua­ Si hay algo que caracterice al paludismo son
dro disentérico y puede, entonces, aparecer fiebre precisamente las crisis febriles. Golgi estableció que
por reacción peritoneal. se produce una brusca subida de la temperatura,
PARAS!TOLOGIA MEDICA SINDROME INFECCIOSOS Y PARASITOSIS 533

TABLA 60-1 coincidiendo con la sincrónica ruptura de muchos miocardio, las meninges o el encéfalo. El síndrome
CARACTERISTICAS DEL SINDROME FEBRIL PRODUCIDO POR LAS PARASITOSJS MAS COMUNES glóbulos rojos parasitados por los plasmodios de la infeccioso es de duración variable y puede ser de
malaria. Esto ocurrirá cada cuarenta y ocho horas, o días o de semanas.
Parasitosis Caracleríslicas de la fiebre cada tercer día, con el Plasmodium vivax, el P. ovale Cuando disminuye la sintomatología y se pasa al
(tercianas benignas) y con el P.falcipantm (terciana periodo subagudo, es frecuente que persista la fie­
Protozoosis maligna), y cada setenta y dos horas, o cada cuarto bre del tipo de las febriculas, además de hepato y
Amibiasis Disenleria amibiana: Febrícula o fiebre > 38ºC y síndrome disentérico. día, con el P. malariae (cuartana). esplenomegalia y micropoliadenia generalizada, pro­
Absceso hepálico amibiano: a) Fiebre alta y sostenida, hepatomegalia Los accesos febriles comienzan con una intensa pias de este período. Las fonnas crónicas de la infec­
dolorosa y leucocitosis. b) Fiebre baja o febrícula y dolor en hipocondrio sensación de frío, castañeteo de dientes y calofríos; ción son afebriles. Igual ocurre con las fonnas con­
derecho. el paciente está pálido y con la piel de gallina. Luego génitas, las cuales, a pesar de constituir una fase
de aproximadamente una hora, aumenta la tempera­ aguda de la infección, habitualmente se desarrollan
Jsosporosis, Criptosporidiosis, En el inicio del proceso, estado febril fugaz 37,5 a 38ºC de I a 3 días tura (39,5-40 ºC) acompañada de gran rubicundez, sin fiebre debido a las características reactivas pro­
Ciclosporosis y Sarcocistosis de duración y diarrea lientérica. náuseas y vómitos. Después, comienza la pias de los niños prematuros e inmaduros.
Malaria Típicas crisis febriles cada 48 horas (terciana) o cada 72 horas (cuartana). defervescencia con abundante transpiración y, el
paciente, muy agotado, cae en una somnolencia y en Toxoplasmosis
Neumocistosis Pacienles con Sida: Comienzo insidioso, síntomas pulmonares, fiebre un sueño profundo. Toda la crisis dura de seis a
muy prolongada (6-8 semanas). ocho horas. El enfenno se siente bien entre los ac­ En esta infección protozoaria, la fiebre se presen­
Pacientes sin Sida: Comienzo brusco, síntomas pulmonares, fiebre muy cesos febriles aunque mantiene las molestias relacio­ ta en las raras formas generalizadas de curso
elevada. nadas con la anemia progresiva que lo aqueja. sobreagudo y en las fonnas nerviosas meningo­
Al comienzo de la infección, puede ocurrir que la encefálicas. Además, la fiebre puede constituir un
Enfermedad de Chagas Fase aguda: Fiebre de magnitud variable, complejo oftalmoganglionar o fiebre sea continua debido a la posibilidad de una signo importante en algunos casos de toxoplasmo­
chagoma de inoculación. infección mixta y simultánea provocada por varias sis ganglionar. El aumento de volumen de los gan­
Fase subaguda: Febrícula, hepato y esplenomegalia, micropoliadenia especies o cepas del plasmodio; luego de algunos glios linfáticos, especialmente del cuello, puede es­
generalizada. días, sólo uno de ellos prevalece y adquiere el típico tar acompañado, en alrededor del 50% de los casos,
Toxoplasmosis Formas generalizadas: Fiebre y compromiso sobreagudo de diversos ritmo de la terciana o de la cuartana. Los accesos de síndrome infeccioso caracterizado por fiebre de
parénquimas. febriles pueden durar varias semanas; luego decre­ 37,5 a 38,4 ºC, cefalea y adinamia, que se puede
cen progresivamente hasta desaparecer por comple­ prolongar durante días y hasta algunas semanas.
Formas 111e11i11goe11cefálicas evolulivas: Fiebre más compromiso variable to. Es frecuente que se produzcan recaídas y, espe­ Igual que en la enfennedad de Chagas, la fonna
del SNC. cialmente con la infección por P. malariae, recidivas congénita de la toxoplasmosis habitualmente es
Formas ganglionares: Fiebre más adenopatías cervicales con o sin ade­ varios años después del ataque inicial. afebril.
nopatías de otros territorios. El médico debe estar atento a algunas infeccio­
Leishmaniosis Forma visceral o ka/a-azar: Fiebre más hepato y esplenomegalia nes bacterianas, muchas veces con colecciones Leishmaniosis
purulentas ocultas, que pueden provocar crisis fe­
briles que remedan una terciana o una cuartana. La fonna visceral o kala-azar, producida por la
He/111i11/osis Leishmania donovani, presenta un síndrome infec­
Neumocistosis cioso, fiebre de magnitud variable y gran hepato y
Sindrome de Uiefller Fiebre, signos y síntomas pulmonares y eosinofilia. esplenomegalia. Las fonnas cutáneas y mucocutáneas
Larva migrante visceral Fiebre, compromiso hepático, pulmonar, ocular o encefálico y eosinofilia. La neumonía por Pneumocystis carinii que se son habitualmente afebriles.
observa en los individuos inmunocomprometidos,
Triquinosis º
Fiebre entre 38 y 40 C, síntomas oculopalpebrales, mialgias, síntomas se caracteriza por su curso febril tanto en los pacien­ HELMINTOSIS
de enteritis y eosinofilia tes con y sin SIDA. En los primeros, la enfennedad
Fasciolosis Fase de invasión: Fiebre de magnitud variable, dolor en la zona hepática es de comienzo·lento, con un largo período, de dos Síndrome de Liieffier
y eosinofilia. a ocho semanas, de fiebre elevada, síntomas
pulmonares y progresivo compromiso del estado Las larvas de Ascaris lumbricoides, de las unci­
Fase de est(ldo: Febrículas ocasionales, crisis febriles elevadas con narias Ancylostoma duodena/e y Necator ameri­
general; en cambio, en los pacientes sin SIDA el
leucocitosis e hipereosinofilia. canus y de Strongyloides stercoralis, deben pasar
inicio de la enfennedad es brusco, con fiebres muy
Esquistosomosis Fase aguda: Fiebre más manifestaciones toxialérgicas. elevadas, además de los síntomas pulmonares. del torrente sanguíneo a los pulmones, antes de
Filariosis alcanzar el hábitat definitivo intestinal. Cuando exis­
Fiebre, linfangitis, línfadenitis y eosinofilia en el inicio de la infección EnfermedaddeChagas te una sintomatología provocada por el paso de
por Wuchereria bancrofti. estas larvas, es decir, el sindrome de Liieffler de
Complicaciones de Quiste hidatídico infectado: Cambio brusco de la sintomatología y evo­ °La fase aguda de esta infección se caracteriza origen parasitario, la fiebre es junto con la sintoma­
helmintosis lución febril, como un absceso. por un síndrome infeccioso acompañado de males­ tología respiratoria y eosinofilia, su principal carac­
Cuadros obstructivos por Ascaris lumbricoid�s: Fiebre más síntomas y tar general, fiebre de magnitud variable, postración terística. La temperatura suele ser elevada y se man­
signos de obstrucción intestinal, �oÍedóéiana, ápéridicular, etcétera. · · · y los signos y síntomas propios de. la lesión de tiene durante varios días, con poca signología
¡· puerta de entrada (complejo oftalmoganglionar o pulmonar, lo que contrasta con las alteraciones
chagoma de inoculación), o del ataque visceral del descubiertas mediante la radioscopia. Aunque todas
534 PARASITOLOGIA MEDICA SINDROME INFECCIOSOS l' PARASITOSIS 535

las larvas de estos nematodos deben hacer este paso peritoneo, rompe la cápsula de Glisson y, por el fiebre elevada y aquellos quistes que no se rompie­ especialmente el producido por la migración del
por los pulmones, el síndrome de Loeffler bien cons­ parénquima hepático, alcanza la vía biliar ron francamente y se infectaron, evolucionan como helminto a la vía biliar, provoca un cuadro de
tituido, es de rara observación. intrahepática, el hábitat definitivo de Fasciola un verdadero absceso. colangitis, en el cual la fiebre es un signo de gran
hepatica. La magnitud de la fiebre en el período de Los graves cuadros obstructivos de la ascaiiasis, importancia.
Larva migrante visceral invasión es variable, pero suele ser moderada.
Además, se acompaña de sintomatología dolorosa
Los huevos del áscaris del perro (Toxocara ca­ del hipocondrio derecho y signos toxialérgicos
nis) del gato (T. cail) pueden ser ingeridos por el (eosinofilia y urticaria).
hombre, con el agua de bebida o con alimentos con­ En el período de estado, cuando la F. lzepatica
taminados con las heces de estos animales. En los ha alcanzado su madurez en la vía biliar intrahe­
niños, esta ingestión se produce al jugar con tierra pática, suelen producirse febrículas. Sin embargo, es
que puede contener los huevos de estos gusanos. frecuente observar alzas térmicas bruscas, que coin­
En el intestino, las larvas resultantes comienzan un ciden con la leucocitosis y la hipereosinofilia, al
esbozo de migración tisular que queda interrumpida producirse un verdadero mecanismo de cavidad
por la inmunidad natural del hombre a estas infeccio­ cerrada por la acción mecánica del parásito dentro de
nes propias de otros hospederos. En efecto, estas la vía biliar dañada.
larvas quedan retenidas principalmente en el lúgado, En ocasiones, la fiebre no es producida por el
en el pulmón o en el ojo, en donde se forman parásito, sino por complicaciones propias de la co­
granulomas que pueden dar sintomatología. (Véase lelitiasis que acompaña a la fasciolosis en alrededor
el capítulo 38: Larvas migran/es). En el caso de que del 50% de los casos.
las larvas sean retenidas en el hígado o en el pulmón,
se produce fiebre elevada, gran eosinofilia y Pulmonar. Junto con la signología pulmonar en
hepatomegalia o signología pulmonar, según el la paragonimosis, se suele observar fiebre de magni­
parénquima afectado. De modo que en niños que tud variable.
presentan fjebre, eosinofilia elevada y compromiso
del hígado o del pulmón, debe plantearse la posibi­ Esquistosomosis
lidad diagnóstica de. un cuadro de larva migrante
visceral. En su fase inicial, se produce un síndrome febril
junto con las manifestaciones toxialérgicas de la
Triquinosis infección: urticaria, alteraciones pulmonares, dia­
rrea, eosinofilia elevada, etc. En las fases tardías,
El síndrome infeccioso es cardinal en su síntoma­ caracterizadas por el progresivo compromiso del
tología, tanto en el período de comienzo como en el hígado y del bazo, la fiebre no es un signo de
de estado de la enfermedad. La triquínosis comienza importancia.
con fiebre, adinamia, cefalea y malestar general en el
70% de los casos. Y en el período de estado esta cifra Filariosis
se eleva a 90%. Es frecuente que en algunos pacien­
tes, la enfermedad se desarrolle con fiebre prolonga­ También en la infección inicial, provocada por
da, de 38 a 40 ºC, y continúe después con febrículas Wuclzereria bancrofti, la fiebre intermitente o conti­
por varias semanas. nua constituye un signo de importancia que acom­
El síndrome febril se debe al estado toxialérgico paña a la linfangitis y a la linfadenitis típicas de estas
producido, en un comienzo por la destrucción masi­ filariosis.
va de las larvas de Tric/zinella en el torrente sanguí­
neo y en los tejidos y, luego, por la destrucción de Complicaciones de algunas helmintosis
las fibras musculares, cuando las larvas se enquistan
en la musculatura esquelética. El origen toxialérgico Durante la evolución de algunas parasitosis pro­
de la fiebre se comprueba por la espectacularidad de ducidas por helmintos, se presentan algunas com­
su desaparición al administrar corticoterapia. plicaciones que pueden ser febriles. El quiste hida­
tídico no complicado se caracteriza por su creci­
Distomatosis miento tumoral lento, sin gran compromiso del es­
tado general; sin embargo, cuando el quiste sufre
Hepática. El estado infeccioso suele ser la úni­ pequeñas efracciones de la cutícula o se produce su
ca manifestación durante el período de ínvasión rotura franca, la infección piógena del quiste o de
de la fasciolosis. En este período, el distoma jo­ la cavidad residual, hace variar fundamentalmente
ven, liberado de la metacercaria en el tubo diges­ la sintomatología. Junto a la signología dependien­
tivo, atraviesa la pared intestinal, repta por el te del escurrimiento del líquido hidatídico, aparece
Capítulo 61 PARASITOLOGIA MEDICA ANEMIA YPARASJTOSIS 537

Las anemias parasitarias más importantes por su una pérdida de 0,15 mL por gusano y por día. Sin
ANEMIA Y PARASITOSIS frecuencia y severidad son las observadas en la embargo, la pérdida de hierro total no es tan ele­
¡! uncinariosis, en la malaria, en la tricocefalosis y en vada, puesto que más del 40% del hierro conteni­
ANTONIO ATIAS
il'
1
la difilobotriosis, por lo cual serán estudiadas en do en la hemoglobina perdida es reabsorbido de
1 detalle. nuevo por el intestino.
iÍq Otro método para el estudio de la anemia en la
ANEMIADELAANQUILOSTOMOSIS anquilostomosis se puede establecer relacionando
'j
,! la pérdida de sangre con la carga parasitaria, repre­
La anemia de la anquilostomosis es de carácter sentada por la cantidad de huevos recogidos en las
hipocrómico y microcítico. En las primeras fases de heces del hospedero. Así, se ha llegado a algunos
la ínfección, el porcentaje de reticulocitos puede ser índices que indican una pérdida de 2, l mL de san­
La anemia se observa con relativa mayor frecuen­ quistosomosis. En algunos casos, la pérdida de san­ normal o aumentado, debido a que aún no se han gre por día/1.000 huevos x gramo de heces, si la
cia en las zonas tropicales y en los países en desa­ gre por el intestino puede no ser manifiesta y se la agotado las reservas de hierro. Aparecen glóbulos infección se debe a N. americanus. A su vez, esta
rrollo, afectando principalmente a las poblaciones de debe investigar expresamente; en cambio, en otros rojos nucleados con punteado basófilo. La médula pérdida alcanza, en el caso del A.duodena/e, 4,47 ±
extracción rural. Los factores determinantes de la territorios, la hemorragia es ostensible como ocurre ósea es de aspecto hiperplástico, con aumento de l ,15 mL de sangre diaria/ l000 huevos x gramo de
incidencia y de la severidad de la anemia siempre son en las hemoptisis provocadas por la paragonimosis los normoblastos; rara vez se observa hipoplasia heces.
múltiples y, muchas veces, el estado anémico resulta o por el quiste hidatídico pulmonar, o en las hema­ medular. El bazo puede presentar una metaplasia Mediante estos diversos métodos de estudio, y
de la suma de algunos de ellos. Entre estos factores rurias de las esquistosomosis debidas al S. /,aema­ eritroide o mieloide. La ferremia y la ferritina sérica a modo de conclusión, se puede establecer que la
se destacan las inclemencias climáticas, la dieta tobium. están disminuidas, aun antes que la anemia sea ma­ pérdida varia entre 2 y 3 mL de sangre en las infec­
hipoproteica, el deficiente aporte de hierro, de vita­ La anemia hemolítica se produce fundamental­ nifiesta. ciones leves, pudiendo alcanzar alrededor de 100 mL,
mina B 12 y de ácido fólico, la malabsorción, las afec­ mente en la malaria y en el kala-azar, pero también La naturaleza hipocroma de esta anemia se com­ en las severas.
ciones hepáticas y las infecciones crónicas. Pero, se suele observar en la toxoplasmosis y en la esquis­ prueba por la muy buena respuesta a la administra­
además, en estas regiones las parasitosis contribu­ tosomosis. En la malaria, la hemólisis se debe a la ción de sales de hierro por vía oral; en estos casos, ANEMIADELA TRICOCEFALOSIS
yen, en gran medida, a la producción de anemia cuya destrucción de los eritrocitos provocada por los la hemoglobina alcanza sus niveles normales al cabo
severidad está relacionada con el número de parási­ plasmodios que los parasitan. En otras parasitosis, de algunas semanas. El solo aumento del aporte de En la tricocefalosis ínfantil masiva, uno de los
tos, su cepa y virulencia, el tiempo de infección y la el hiperesplenismo juega un papel de importancia hierro en la dieta, sin tratamiento antiparasitario, surte signos más constantes es la anemia provocada por
susceptibilidad a las infecciones de parte del hospe­ en la génesis de la hemólisis. En algunos casos, se un efecto normalizador sobre la hemoglobina siem­ la deficiencia de hierro. La principal causa de esta
dero. En otras zonas geográficas, la anemia provoca­ discute la posibilidad que la destrucción de los pre que la infección sea leve; en las ínfecciones pérdida de glóbulos rojos es la acción hematofágica
da por parásitos se ve favorecida por condiciones glóbulos rojos sea inmunoinducida, aunque con severas, esta medida dietética no es capaz, por sí de Trichuris trichiura. Los gusanos, aún enhebra­
ecológicas especiales como ocurre con la frecuencia la prueba de Coombs resulta negativa. sola, de curar la anemia. El tratamiento de la parasi­ dos a la mucosa cecal recién abierta, contienen un
difilobotriosis (zonas lacustres, presencia de otros La hemólisis en la esquistosomosis ocurre habi­ tosis, acompañado de una dieta normal, logra norma­ líquido rosado que es positivo a la reacción de la
hospederos definitivos, etc.). tualmente en la etapa crónica de la infección y está lizar los valores de la hemoglobina en plazos de bencidina. La porción anterior del helminto, delgada
Los mecanismos por los cuales las parasitosis asociada con el daño hepático y la consiguiene quince a veinte meses. como un cabello, termina en una verdadera lanceta
producen anemia son variados. Muchas veces los hipertensión portal. La causa fundamental de la anemia en la unci­ bucal provista de movimientos rotatorios muy velo­
parásitos provocan una alteración nutricional cró­ En algunas parasitosis, se puede desarrollar una nariosis es la pérdida de sangre debido a la suc­ ces, de protrusión y de retracción, gracias a los
nica cuyas causas pueden ser: la anorexia, la malab­ anemia microcítica hipocrómica debido a la incapaci­ ción del gusano. La cantidad de esta pérdida se ha cuales puede punzar, penetrar en el interior de la
sorción, los vómitos, la diarrea, el sangramiento mi­ dad para aprovechar el hierro proveniente de la he­ podido evaluar mediante diversos métod,os. Uno mucosa, fragmentar sus tejidos y llegar a los vasos
croscópico o el daño hepático; o bien, pueden des­ moglobina de los glóbulos rojos destruidos normal­ de ellos es el estudio de las hemorragias ocultas sanguíneos. El esófago de naturaleza muscular, co­
encadenar anemia en corto tiempo debido a las he­ mente por el organismo, Jo que puede observarse en en las heces, que es positivo, pero se trata de un locado detrás de la lanceta bucal, ejerce una potente
morragias, a la hematofagia, a la hemólisis o a la algunos casos de filariosis, amibiosis, tricocefalosis examen demasiado grosero para cuantificar la pér­ fuerza de succión, lo que le permite ingerir glóbulos
competencia metabólica. y ascariasis. Este tipo de anemia puede diferenciarse dida de sangre. Otro método, descrito desde hace rojos, plasma y líquidos tisulares.
La hemorragia, con la consiguiente pérdida de de la provocada por la deficiencia de hierro, mediante muchos años, consiste en cuantificar la sangre Sin embargo, la hematofagia, como fenómeno
glóbulos rojos y deficiencia en hierro, se observa la obtención de este elemento por medio de la aspi­ expelida por el anquilostoma cuando se encuentra aislado, no permite interpretar en su integridad la
sobre todo en el intestino y puede ser provocada por ración de la médula ósea y por una baja concentra­ en el intestino; sin embargo, mediante este examen anemia de la tricocefalosis. Hoy se sabe que la carga
la acción directa del parásito contra la mucosa intes­ ción de transferrina en el suero. se obtienen valores demasiado elevados: 0,8 mL parasitaria, es decir, la cantidad de parásitos en el
tinal, como ocurre en la uncinariosis, en la amibiasis, Otro grupo de anemias se producen por fallas en de sangre por gusano y por día. Ultimamente, el hospedero, es fundamental para desencadenar la
en la balantidiosis, en la estrongiloidosis y en la la función medular. En la difilobotriosis, existe una uso de radioisótopos ha permitido concluir que la anemia. Por otra parte, es importante el estado nutri­
tricocefalosis, o por la acción mecánica de los hue­ competencia metabólica por la vitamina B 12; en otros pérdida diaria en el hombre y en el perro infectado tivo del paciente. En efecto, casi todos los casos de
vos de helmintos como en el caso de la es- casos, puede haber un aporte insuficiente de con uncinarias, varía entre 2 y 3 mL de sangre en anemia provocados por la tricocefalosis ocurren en
sustratos esenciales para la médula ósea debido a la la infección ligera, pudiendo alcanzar cerca de 100 niños pequeños con muy severas deficiencias nutri­
presencia de parásitos que producen malabsorción, mL en las infecciones severas. Al mismo tiempo, tivas.
diarrea crónica o enfermedades hepáticas y, por úl­ se ha determinado que la pérdida depende de la De lo dicho se desprende que es fundamental
Nuestros sinceros agradecimientos al Dr. Lautaro Vargas, timo, puede existir una mieloptisis o invasión de la especie de uncinaria considerada. Necator establecer una relación entre la cuantía de la infec­
médico pediatra y hematólogo del Hospital San Juan de médula por células parasitarias, como ocurre en el americamts produce una pérdida de 0,03 mL de ción por tricocéfalos y la anemia. Clínicamente el
Dios de Santiago, por su gentileza de revisar este manus­ kala-azar, lo que probablemente hace disminuir la sangre por gusano y por día, Ancylostoma canimtm parasitólogo calcula la carga parasitaria por la canti­
crito y por sus atinados consejos. producción de glóbulos rojos. de 0,05 mL" por gusano y por día y el A. duodena/e dad de huevos encontrados en las heces. Otto de-
1 !

538 PARASITOLOG/A MEDICA ANEMIA l' PARASITOSIS 539

mostró, en 1935, que la infección leve producida por La caída inicial del nivel de hemoglobina, se pasivamente al glóbulo rojo. posee una carga negativa neta que produce la mu­
T.trichiura no provoca anemia. Esta sólo aparece debe principalmente al daño que produce el plas­ Aparentemente, en algunos casos, la anemia tua repulsión con otros eritrocitos. A medida que \a
cuando el intestino alberga varios centenares de modio sobre los glóbulos rojos. La ulterior intensi­ podría explicarse por la opsonización y fagocitosis célula envejece, se pierde esta carga negativa de su
parásitos. Para Jung y Beaver, .la anemia se presenta ficación de la anemia se debería en la minoría de los de los glóbulos rojos sensibilizados por anticuerpos superficie externa con lo cual aumenta su aglu­
cuando se eliminan alrededor de treinta mil huevos casos, a mecanismos inmunológicos, y en la anemia que fijan C3. tinabilidad y disminuye la capacidad para proteger­
por gramo de heces y por día. Layrisse estima que la crónica, la diseritropoyesis jugaría un papel prepon­ Hasta ahora, no se ha podido, en la mayoría de se contra la secuestración y la hemólisis. Tal vez,
infección producida por ochocientos gusanos, los derante, sobre todo en niños con su inmunidad com­ los casos, relacionar el grado de anemia con la pre­ las demandas metabólicas de los plasmodios pue­
que producen más de cinco millones de huevos por prometida. sencia de una prueba de Coombs positiva. dan disminuir prematuramente la carga negativa del
día, induce anemia en los niños. Este cálculo ha La mayoría de los estudios, parecen demostrar glóbulo rojo, lo que explicada su aglutinación y
tenido comprobación anatomopatológica clara en Eritropoyesis ineficiente o defectuosa. En el pa­ que el factor inmune en la hemólisis que se observa sedimentación en los pequeños vasos sanguíneos
tres de los cuatro casos con autopsia de Getz: se ludismo crónico, especialmente en los niños, se en la anemia por P.falciparum, ocurre sólo en algu­ y la prematura destrucción de los eritrocitos infec­
trataba de niños con anemia severa con un 30% de observa una anemia importante y recuento reti­ nos casos y su importancia es menor. tados en la sangre circulante y en el sistema
hemoglobina, en los cuales recuperó entre 1.100 y culocitario bajo, con evidencias de diseritropoyesis reticuloendotelial.
4.100 tricocéfalos. (cariorexis, mitosis desiguales de los eritroblastos). Alteraciones del glóbulo rojo que protege de la
Layrisse, midiendo la pérdida de sangre en las Además, la actividad, macrofágica de los macrófa­ malaria. Las evidencias epidemiológicas que algu­ ANEMIADELADIFILOBOTRIOSIS
heces con Cr 51 en niños con diverso grado de gos medulares, está aumentada. nas hemoglobinopatías y otras alteraciones de los
infección provocada por T. trichiura, concluyó que Tanto la diseritropoyesis como la eritropoyesis eritrocitos, protegen de la infección por P. falcipa­ Uno de cada quinientos o uno de cada mil pa­
estaba alrededor de·los 0,005 mL por gusano y por ineficaz, se demuestran en los estudios de eritro­ rum, han sido confirmadas en el laboratorio. cientes infectados con Diphyllobothrium latum,
día. Además, llegó a calcular que se pierde alrededor cinética con hierro (menor incorporación del fierro en En la anemia drepanocítica (Hb-S), la dificultad desarrolla una anemia macrocítica muy semejante a
de 0,8 mL de sangre por cada millón de huevos por los glóbulos rojos circulantes) y en las investigacio­ que encuentra el plasmodio para desarrollarse en los la genuina anemia perniciosa. Sólo se diferencia de
gramo de heces día y cerca de 0,25 mL por cada mil nes del ciclo celular con timidina (mayor proporción glóbulos rojos, se debería a que en esta hemo­ ésta en que se presenta habitualmente en personas
huevos por gramo de heces por día. de eritroblastos en fase premitótica y, en algunas globinopatía existe un drenaje mayor de K que ne­
+ jóvenes, entre los veinte y treinta años, y en que los
células, detención del ciclo). Estas alteraciones ce­ cesita para su desarrollo y, también, porque en esta enfermos poseen un jugo gástrico normal.
ANEMIADELAMALARIA san al desaparecer los parásitos, sea por el tratamien­ enfermedad la membrana del glóbulo rojo es más Los pacientes consultan por palidez, fatiga,
to o en forma espontánea, Jo cual sugiere que la rígida. glositis, palpitaciones y parestesia de las extremida­
La anemia en la malaria es hemolítica: las sucesi­ diseritropoyesis está relacionada con la presencia de También en la Hb-C, los pacientes presentan des inferiores. En el sistema nervioso, se encuentra
vas destrucciones de los eritrocitos parasitados in­ los plasmodios. menos susceptibilidad a la malaria, sobre todo los una degeneración combinada de la médula espinal y
duce a este estado. La cuantía de la anemia varía homozigotos. No se conoce el mecanismo que ejerce de los nervios periféricos.
según la forma de la infección; en las formas malig­ Destrucción de los glóbulos rojos parasitados la protección. Otro tanto ocurre en la Hb-F, lo que La deficiencia de vitamina B12, que participa en
nas, provocadas por Plasmodium falcipa111111, un (Hemólisis propiamente tal). El mecanismo principal explicaría la baja incidencia de malaria en los prime­ la síntesis del ADN necesario para la multiplicación
solo acceso febril puede destruir un millón de glóbu­ de la anemia en la malaria es la invasión de los ros seis meses de vida, la mayor prevalencia heredi­ celular, provoca alteraciones en el tejido hemato­
los rojos por milímetro cúbico de sangre; en cambio, glóbulos rojos por los plasmodios, con la consi­ taria de Hb-F en las áreas endémicas, además de la poyético. En efecto, se observa una hematopoyesis
en las formas crónicas, la anemia es moderada y guiente destrucción eritrocitaria. La destrucción es menor morbilidad y mortalidad en los pacientes con ineficaz, con muerte prematura de los precursores de
alcanza cifras de 3 a 3,5 millones de eritrocitos por intravascular y por secuestración en el bazo y en talasemia. las tres series hemáticas, lo que explica, en gran
mm3 con un índice de hemoglobina de alrededor de otras regiones de la microcirculación. Existen claras Existen evidencias epidemiológicas de que el medida, la anemia, la leucopenia y la trombocitopenia
70%. El tiempo necesario para el desarrollo de la demostraciones clínicas y experimentales respecto a déficit de glucosa-6-fosfato-dehidrogenasa protege­ frecuentes en estos casos. Los eritrocitos pueden
anemia también depende de la especie de plasmodio; que la hemólisis en el territorio esplénico y ría de la infección malárica, especialmente en las caer hasta un millón por milímetro cúbico con dos a
la anemia producida por P. vivax se desarrolla rápi­ extravascular, obedecería a la rigidez y daño en la mujeres portadoras heterozigotas. Algunos autores cuatro gramos por ciento de hemoglobina. El aspec­
damente por la predilección del parásito por los membrana del glóbulo rojo, ocasionado por los pa­ explican este efecto protector, aduciendo que los to de la médula ósea es igual al que se presenta en
eritrocitos inmaduros (reticulocitos), la anemia por P. rásitos. plasmodiosnecesitan del NADPH del eritrocito como la anemia perniciosa genuina: hiperplasia de la serie
falciparum es más rápida aún, porque el parásito un cofactor para la glutation reductasa. roja, principalmente con promegaloblastos y
afecta a cualquier glóbulo rojo, aunque penetra con Hemólisis inmunoinducida. Desde los estudios Una complicación muy seria de la malaria produ­ megaloblastos, y un notable aumento del volumen
mayor facilidad y rapidez en los eritrocitos jóvenes; de Zuckerman, se discute el papel del factor inmuni­ cida por P. falciparum, es la fiebre hemoglobinúrica de los precursores de la serie blanca (gigantismo de
en cambio, el P. malariae tiende a parasitareritrocitos tario en la hemólisis de la malaria, siendo el argumen­ o blac/c water fe ver; es decir, la aparición brusca de mielocitos y juveniles), así como una hiperseg­
maduros y la anemia es más lenta en aparecer; P. to más importante el hallazgo, en algunos casos, de una hemólisis masiva con hemoglobinuria. Esta mentación nuclear de sus elementos maduros.
ovale también produce una anemia en forma lenta la prueba de Coombs positiva. hemólisis masiva se observa con mayor frecuencia La remisión de la anemia se logra con la expul­
porque, si bien parasita reticulocitos, muchos de Recientemente, se ha estudiado la incidencia y el en las recaídas de maláricos tratados con quinina, sión del parásito o con la administración de vitami­
ellos no se destruyen y continúan su desarrollo significado de la prueba de Coombs positiva que se lo que ha hecho plantear la posibilidad de induc­ na B 12. Después de un tratamiento que elimine al
junto con el parásito. había encontrado en el 50% de un grupo de niños de ción de anticuerpos por medio del tratamiento. Sin gusano, se produce una reticulocitosis igual a la
La hemólisis por sí sola, no explica la anemia de Gambia, infectados con el P. falciparum. La sensi­ embargo, este mecanismo no sería la única causa de obtenida con el extracto hepático o con la vitamina
la malaria y su asociación con la pancitopenia, dis­ bilización principalmente es con C3, pero también esta hemólisis fulminante, porque algunos pacien­ B12 y el cuadro clínico vuelve a la normalidad. De�­
minución de granulocitos y trombocitopenia en la con IgG sólo, IgG más C3, e IgG más C3 y C4. Estos tes desarrollan la fiebre hemoglobinúrica ya en su tro de las cuarenta y ocho horas, la megaloblastos1s
sangre periférica. Indudablemente, los mecanismos anticuerpos tienen actividad contraP.falcipan1111, primer ataque de malaria y antes del uso de la qui­ de la médula ósea cambia por una proliferación
que intervienen son múltiples y se traducen por una pero no se sabe si se trata de autoanticuerpos con nina. Conrad propone una explicación biofisica del normoblástica.
disminución de la sobrevida del eritrocito, junto a propiedades antiparasitarias y antieritrocíticas, fenómeno relacionada con la carga eléctrica de Los ya clásicos trabajos de von Bonsdorffy de
una respuesta medular inapropiada. o de anticuerpos antiparasitarios que se adosan superficie de los eritrocitos. El glóbulo rojo normal otros investigadores finlandeses, han dilucidado la
·1•·.
. .

540 PARASITOLOGIA MEDICA Capítulo 62


etiopatogenia de la anemia de la difilobotriosis.
Por razones metabólicas, el parásito necesita gran­
BIBLIOGRAFIA
EOSINOFILIA Y PARASITOSIS
des cantidades de vitamina B 12• Si a pacientes in­ Burrows R, Lillis W. The whipworrn as a blood sucker. J
fectados con D. latum se administra, por vía oral, Parasitol 1964; 50:675. ISABEL NOEMI y ANTONIO ATIAS
esta vitamina marcada con Co60 , se observa que Getz L. Massive infection with Triclmris tric/ziura in
alrededor del 44% de la dosis es absorbida por el children. Report of four cases with autopsy. Am J Dis
gusano. Por otra parte, los extractos secos del D. Child 1954; 70:90.
latum presentan un alto contenido de vitamina B 12, Jung RC, Beaver PC. Clinical observations of Tric/wris
mucho mayor que otros helmintos intestinales del trichiura infestation in children.Pediatrics 1951; 8:548.
hombre y, administrados estos extractos junto con Layrisse M, Aparcedo L, Martínez-Torres, C, Roche M.
el jugo gástrico a pacientes que padecen de la Desde 1891, año en que Paul Erlich describió el les de Charcot-Leyden (CLC). Estos se hallan dis­
Blood loss due to infection with Tric/zwis trichiura eosinófilo por primera vez, se ha asociado a esta persos en el núcleo y en el citoplasma de estas
genuina anemia perniciosa, son capaces de curar la
Am J Trop Med Hyg 1967; 16:613. célula y a su aumento en la circulación, con la células cuando son activadas.
afección.
Otto GF. Blood studies on trichuris infected and worm presencia de ciertas infecciones parasitarias, gene­ Los eosinófilos provienen de sus precursores,
No todos los pacientes infectados con D. latum
llegan a la anemia. Por el contrario, según los auto­ free children in Louisiana. Am J Trop Med 1935; rahnente helmintosis tisulares. En la última déca­ las células progenitoras de la médula ósea y cons­
res fineses, la experiencia obtenida con el trata­ 15:693. da, se ha logrado dilucidar algunas de sus funcio­ tituyen el 3% del total. Una vez maduras, migran a
miento de unas mil personas por año, demuestra Pasvol G, Wilson RJM. The interaction of malaria parasites nes, principalmente los mecanismos de destrucción los tejidos en un lapso de 18 horas. Los eosinófilos
que la anemia, como ya se dijo, se presenta en uno with red blood cells. Br Med Bull 1982; 38:133:40. de fonnas larvales, en especial histoparásitos meta­ en el hombre tienen una vida media de horas.
por cada quinientos o cada millar de infectados. Roche M,-Leyrisse M. The nature and causes of hookworrn zoarios y, asimismo, su papel activo en la inmuni­ Más que células circulantes, son tisulares y se
Para von Bonsdorff, la aparición de anemia depen­ anaemia. Am J Trop Med Hyg 1966; 15:1030. dad. las encuentra distribuidas fuera de la médula ósea,
de de la altura en que esté situado el D. latum en Seed TM, Kreier JP. En: Kreier JP. Malaria. Vol.2 en la piel, pulmones, aparato gastrointestinal y uri­
el intestino. Si el excólex se encuentra en la parte Pathology, Vector Studies and Culture. New York: CARACTERlSTICAS GENERALES nario, sitios próximos al contacto de diferentes es­
distal del yeyuno o del íleon, lo que ocurre en la Academic Press !ne 1980; 1-46. DEL EOSINOFILO tímulos antigénicos. La proporción en que se les
mayoría de las personas infectadas, queda para el Von BonsdorffB. The broad tapeworrn story. Acta Med. encuentra en los tejidos es de cien células a una
huésped una superficie suficiente para absorber la Scand 1978; 204:241-7. El eosinófilo en la vida neonatal y fetal puede circulante. Tal como otras células, los eosinófilos
cantidad de vitamina B 12 necesaria para resguardar­ Von Bonsdorff B. Diphyllobothriasis in Man. London: ser producido en sitios extramedulares (hígado, bazo, tienen múltiples receptores de membrana, de los
lo de la anemia. Si, por el contrario, el parásito tiene Academic Pres�"Ltd. 1977. timo, nódulos linfáticos), pero en el adulto, son que cabe destacar aquellos por adhesión (ligandos
una u bicaéión proximal en el intestino, adquiere Weatherall DJ, Abdalla S. Tbe anaemia of Plasmoditm elaborados exclusivamente por la médula ósea. del endotelio vascular), integrinas que se unen a las
ven!aJa_ Los eosinófilos constituyen el 2 a 5% de los inmunoglobulinas y los ligandos de los carbohidra­
�obre el hospedero en la competencia por Jalciparum malaria. Br Med Bull 1982; 38:147-51.
tos que permitirían a esta célula atravesar al espacio
la Yitamma y entonces se desarrolla la anemia ver­ WoodruffAW, Ansdell VE, Pettitt LE. Cause of anaemia leucocitos periféricos. Son esféricos y miden 10-15
minosa. in malaria. Lancet 1979; 1:1055-7. µg de diámetro. Poseen un núcleo con dos lóbulos intravascular. En los focos inflamatorios existiría
unidos por un puente de cromatina. En el hombre, una adhesión selectiva mediada por IL-5 e IL-3,
en la membrana del 20% de estas células existen además de proteínas que permiten una fijación de
gránulos específicos, generalmente esféricos u ovoi­ estas células a moléculas del endotelio vascular
des, los cuales contienen un componente cristalino (VLA)-4 y VCAM-1 (derivados de células poli­
rodeado por un material electrondenso y en el cito­ morfonucleares), cuya expresión es regulada por
plasma existen gránulos acidófilos de tamaños dife­ IL-4, facilitando de este modo la migración celular
rentes. Algunos son grandes (1 x0,6 µg) y presentan a los tejidos en donde existe inflamación. Además
una matriz en la que se pueden encontrar enzimas es capaz de unirse a las proteínas de la matriz,
como peroxidasa, betaglucuronidasa, fosfatasa áci­ aumentando los niveles de LTC4 y la liberación de
da e histaminasa, y una proteína básica mayor (MBP) peróxido de hidrógeno nocivo para los tegumentos
con un peso molecular de 10.000 daltons. Además del parásito y en ocasiones, también del huésped. El
existen tres tipos de gránulos de proteínas: la pro­ eosinófilo también posee receptores para Fe para
teína catiónica (ECP), la peroxidasa eosinofilica IgG, IgA, IgD, lgM e lgE.
(EPO) y la neurotoxina derivada de eosinófilos (EDN La unión del eosinófilo a dos lgE especificas
o EPX). Estas proteínas básicas se tiñen con la contiguas,en presencia de suero opsonizado, es ca­
eosina; de ahí el nombre de esta célula. En los paz de destruir larvas de Schistosoma en estudios in
gránulos pequeños (0,2 x 0,2 µg), se hallan las vitro. Se ha involucrado a estos mecanismos y re­
enzimas arilsul:i'atasa y fosfatasa ácida. El resto del ceptores, en especial, al CD32 en la fagocitosis,
citoplasma posee los organelos habituales de todas secreción de gránulos de proteínas, generación de
las células. En la membrana celular, se ha descrito mediadores lipídicos como el PAF y el LTC4. Si al
recientemente fosfolipasa A y D y lisolecitinasa. eosinófilo se lo estimula con interferón gamma na­
Los eosinófilos contienen también cuerpos lipídicos, tivo, se expresan los receptores CD16, CD64 y CD32.
los que son organelos no unidos a membranas y que Al poseer receptores para la IgA, el eosinófilo
esencialmente contienen ácido araquidónico. Los puede ser gatillado por esta inmunoglobulina a una
gránulos primarios poseen en su interior los crista- degranulación de sus proteínas en fonna importan-
542 PARAS/TOLOG/A MEDICA

te. Si se le enfrenta a citocinas, como el factor es­


timulador de macrófagos (GM-CSF) en un medio
Los factores eosinofilotácticos son aquellos que
atraen eosinófilos donde se encuentra el parásito.
T EOSINOFIL/A l' PARASITOSIS

parásito, su correspondiente antígeno gatilla una


respuesta linfocitaria Th que estimula la produc­ visto en infecciones por Schistosoma mansoni, T.
543

directamente o por sus derivados tóxicos. Esto se ha

de cultivo celular, el eosinófilo es capaz de expresar Dentro de ellos, cabe mencionar el C5a el cua 1 atrae ción de eosinófilos, anticue1pos anafilactoideos y spiralis y microfilarias. Por lo tanto, los radicales
antígenos de leucocitos humanos como HLA-DR y eosínófilos, neutrófilos y macrófagos. A su vez, las células cebadas. Secundaria a la interacción de es­ superóxidos tendrían un papel en la destrucción de
un aumento de los niveles de ICAM-1, sustancia células cebadas y basófilos, al secretar sus sustan­ tos elementos se produce la degranulación de las helmintos.
relacionada con la presentación de antígeno a las cias, liberan factores eosinofilotácticos (ECFA, his­ células cebadas, logrando estas últimas y sus pro­ Otra propiedad descrita del eosinófilo, es su
células T. También responde a mediadores solubles tamina, factor estimulador de plaquetas, PAF, y ductos, una localización selectiva. Tanto los pro­ capacidad fagocitada de complejos antígeno anti­
tales como F-MLP, C5a, C3a y RANTES (produci­ otros factores resultantes de la degradación del áci­ ductos de la célula cebada como la de los linfocitos cuerpo. Su papel protector, en las infecciones para­
do en reacciones inflamatorias), como también a los do araquidónico, la IL-3 y GM-CSF). Además los Th, incrementan la acción de los eosinófilos. Estas sitaiias se ha hecho evidente al usar suero antieosinó­
lipídicos, tales como el PAF (Factor activador de mismos histoparásitos liberan factores quimio­ últimas células se unen a las cubiertas parasitarias filo. En tales circunstancias, infecciones por F. he­
plaquetas). tácticos directos o indirectos (EGF), los que atraen y/o a los factores del complemento, liberándose ra­ patica, T. spiralis, S. 111a11soni y D. l'ivipc1rus, tie­
Para que el eosinófilo migre a los sitios en que a los eosinófilos. Estas células se estimulan al en­ dicales snperóxidos altamente reactivos y proteínas nen un curso más pro longado y severo.
su función es necesaria, deben participar quimio­ frentarse a IgE, la cual se sintetiza frente a la pre­ preformadas, produciéndose finalmente la fagocito­ De lo expuesto se desprende que el eosinófilo es
taxinas específicas tales como el PAF, C5a, IL-5, sencia de ciertos antígenos, fundamentalmente pa­ sis de complejos antigénicos y secreción de diferen­ capaz de dañar al parásito directa o indirectamente,
IL-2, la C-C quimocina selectiva de eosinófilos rasitarios, existiendo estudios que demuestran que tes productos. al modular las reacciones de hipersensibilidad. Sin
RANTES. A su vez los e9sínófilos son capaces de en la mayoría de las histoparasitosis producidas por La función y características del eosinófilo en embargo, una elevación mantenida y prolongada de
liberar potentes mediadores tales como las proteí­ helmintos, esta imnunoglobulina se halla muy ele­ infecciones parasitarias aún está en pleno estudio. estas células y su degranulación progresiva, llevaría
nas básicas, mediadores lipídicos, citocinas, protea­ vada. También el linfocito T activado, es un factor Se ha visto qne estas células en presencia de antíge­ a un daño en los tejidos (síndrome de hipereosi­
sas, radicales superóxidos y peróxido de hidrógeno. capaz de estimular el aumento de eosinófilos circu­ nos parasitarios, poseen un tiempo de generación noji!ia). Esto ocurre por acción de su proteína bá­
Enfrentado el organismo a un alergeno, se esti­ lantes a través de la síntesis del factor ESP. Ade­ medular menor y emergen desde la médula en die­ sica mayor (PBM), radicales superóxidos, hidrola­
mula por diferentes mecanismos la célula cebada. más, el macrófago estimulado frente a un antígeno cicicho horas. Además, se ha comprobado que pre­ sas lisosomales y productos del ácido araquidónico,
Debido a su dotación enzimática, el eosinófilo es extraño al organismo, liberaría el Factor de Necro­ sentan un mayor número de receptores Fe para lgE, entre los que destacan los leucotrienos, prostaglan­
capaz de neutralizar la acción de estás células. La sis Tumoral (TNF), que también tendría un papel lgM, IgA, lgG y complemento (C3b, C4 y C5a) lo dinas y otros productos del eosinófilo activado. Son
arilsulfatasa neutraliza la acción de SRS-A de las en la activación de los eosinófilos. Por su paite, los cual sería una· evidencia de qne el parásito influye numerosas las patologías asociadas a eosinofilia.
células cebadas, la fosfolipasa D inactiva al PAF, la monocitos secretarían dos factores estimulantes de en la maduración celular. Entre ellas debemos destacar las patologías alérgi­
histaminasa a la histanlina, etc. De este modo, el eosinófilos, el ESF de 35 kDa, que promueve la Acerca de la función del eosinófilo, hay indicios cas (asma bronquial, fiebre de heno y urticaria),
eosinófilo tiene un papel importante en el control de producción de radicales superóxidos, y el factor de qne indican su tendencia a la destrucción y/o al desórdenes gastrointestinales (gastroenteritis eosi­
las reacciones de hipersensibilidad, inhibiendo y monocito derivado de la citotoxicidad de eosinófi­ daño de los parásitos. Esto se ha observado a la nofilica, colitis ulcerativa, enteropatía perdedora de
neutralizando la degranulación de basófilos y célu­ los M-ECEF que en conjunto con la IgE, sinergiza microscopia electrónica, con la demostración de proteínas), hematológicas (enfermedad de Hodgkin,
las cebadas. la acción de estas células. Además. el isotipo de las eosinófilos adheridos a la superficie de larvas de S. recuperación de una linfocitosis), afecciones pul­
Existen estudios in vivo e in vitro, en que se inmunoglobulinas también tiene un papel en la ac­ mansoni, descargando su contenido citoplasmático. monares (eosinofilia pulmonar), eosinsofilias fami­
demuestra un control inmunológico en la produc­ tividad de los eosinófilos, cosa que también ocurre Por esta acción, se producen fracturas y lesiones de liares y hereditarias, postinfecciones bacterianas
ción de eosinófilos. Así, se ha comprobado que su al estimular la vía alterna del complemento. Así los tegumentos del parásito, afectando su sobrevida. (estreptococias, neumonitis por Chlamidias sp),
aumento en las infecciones parasitarias es depen­ depósitos de C3 aumentan la citotoxicidad mediada Una situación semejante ocnrre al enfrentar eosinó­ virales (hepatitis y mononncleosis infecciosa), tras
diente de las células T. Existen factores eosino­ por eosinófilos, pero este fenómeno sólo ocurre en filos con larvas de T. spiralis, pero en este caso, el uso de ciertos medicamentos como penicilina,
poyéticos entre los que destacan tres citociuas, la presencia de anticuerpos. Por otra parte, se ha visto para ejercer su efecto parasiticida, debe contar con fenobarbital, postirradiación y en ciertas vasculitis.
interleucina-3 (IL-3), IL-5 y factor de estimulación que algunos parásitos (Trichinel/a spiralis, Ascaris la presencia de anticuerpos y complemento. Efectos Dentro de las posibles causas parasitarias, des­
de colonias de macrófagos (GM-CSF), relacionados lumbricoides, Schistosoma mansoni y Taenia taeni­ similares se han observado en Onchocerco volvulus tacan las producidas por helmintos tisulares. Evi­
a su crecimiento, proliferación y diferenciación formis), son capaces de liberar factores quimio­ y T1J1pa11oso111a cruzi. dentemente, al investigarse la causa de una eosino­
medular. En el hombre los genes que comandan la tácticos de los eosinófilos, sea directamente o a Además, el eosinófilo es capaz de producir da­ filia debe contemplarse la edad del paciente, la zona
producción de IL-3, IL-4, IL-5 y GM-CSF se hallan través de la activación de las fracciones C3a, C5a ños a complejos antígeno parasitario-anticnerpos. geográfica de la cual procede, antecedentes mór­
en el brazo largo del cromosoma 5. Los anticuerpos del complemento, entre otros. Comprometidos en el daño parasitario está la pro­ bidos, saneamiento ambiental de la región donde
anti IL-5, anulan la respuesta eosínofilica generada Todos estos mecanismos contribuyen probable­ teína básica mayor (PBM) (10.000 daltons), la pro­ vive, características climáticas de la zo�m, hábitos
por parásitos. La lL-1 y IL-6 aumentan la sensibi­ mente a la génesis del aumento de eosinófilos frente teína eosinofilica catiónica (ECP), la peroxidasa alimentarios, costumbres, existencia de animales
lidad de la Siem ce/Is a la lL-3. La IL-3 y el factor a antígenos extraños al organismo. Los eosinófilos eosinofilica (EPO), la neurotoxina derivada de eosi­ domésticos, etc. Así, por ejemplo, en estudios prac­
estimulador de colonias G-CSF aumentan la res­ presentan una variación diurna, alcanzando un nú­ nófilos (EDN), los que para llevar a cabo sus efectos ticados en adultos en la Clínica Mayo (USA). se
puestas de las células progenitoras a IL-5, siendo la mero superior en la noche. Este hecho se ha atribui­ parasiticidas, deben contar con la presencia de C3 atribuyó a los agentes parasitarios sólo un 4% de las
IL-5, la principal mediadora en las infecciones pa­ do a la variación del ciclo del cortisol. (larvas de Nippostrongy/us y Schistosoma spp). eosinofilias estudiadas; en tanto que en Chile, en
rasitarias. Los linfocitos Th I estarían relacionados Existen también mecanismos oxigenodepen­ población pediátiica, los agentes parasitarios serian
a la producción de lL-2 e interferón gamma (IFN­ PAPEL DEL EOSINOFILO dientes que el eosinófilo emplea para ejercer su los responsables de alrededor del 80% de las
gamma); las células Th2 se relacionarían con la EN LAS INFECCIONES PARASITARIAS efecto antiparasitario, los cuales son radicales de eosinofilias investigadas.
génesis de IL-4, IL-5, mientras que IL-3 es elabo­ oxígeno altamente reactivos, a saber: radicales su­ Se considera como eosinofilia todo aumento de
rada por ambos tipos de células. Por lo tanto, la Una vez que un helminto invade los tejidos del peróxidos, peróxido de hidrógeno, hidroxilo, ácido estas células en circulación, por sobre 500 cels/mm.
eosinofilia es una respuesta al estímulo de células hombre, se produce una inflamación secundaria hidroclórico. Estos radicales son fuertes oxidantes, Esta cifra absoluta, tiene mayor valor que las
T, de diferentes alergenos, dentro de los que desta­ inespecífica, tratando de cirscunscribir al invasor. los que reaccionan con proteínas del ADN, lípidos eosinofilias relativas o porcentuales, las cuales pue­
can los antígenos de helmintos histoparásitos. Si esta respuesta es insuficiente para eliminar al y glicosaminoglicanos, produciendo daño celular den aparecer como nonnales en presencia de leuco-
544 PARASITOLOG/A MEDICA EOS!NOFILIA YPARASITOS/S 545

TABLA 62-1 presencia de Hymenolepys nana, el más pequeño de nofilia muy elevada constituye un signo frecuente,
CUANTJA DE LAS EOS!NOFILIAS los cestodos que parasitan el intestino del hombre y pero tiende a qisminuir en las etapas tardías de la
EN LAS PRINCIPALES PARASITOSIS DEL HOMBRE
que es observable en los niños predominantemente, infección.
evoluciona con una eosinofilia discreta (900 eos/ En zonas tropicales de Asia, Africa e Indias
Parasitosis Cuantía de las Parasilosis Cua11tía de las mm3). En la cisticercosis, tampoco se observa au­ Occidentales, se ha descrito en el hombre el síndro­
mento de los eosinófilos en la sangre periférica; sin me de eosinofilia tropical, con un aumento de los
del intesti110 eosi11ofi/ias tisulares eosinofilias embargo, cuando se encuentran uno o más eosinó­ eosinófilos hasta 80% y leucocitosis de evolución
filos en el Iíquidp cefalorraquídeo, constituye un crónica, que se acompaña de fiebre, tos asmatifonne,
Protozoosis Pro/o.oasis
posible signo diagnóstico de la neurocisticercosis, urticaria, linfadenitis y esplenomegalia y, en un 50%
lsosporosis +++ Toxoplasmosis ganglionar + más aún, si se acompañan de un cuadro clínico neu­ de los pacientes, de hepatomegalia. En los bron­
rológico compatible. quios se presenta un infiltrado celular eosinofilico,
He/111i11/osis Helminlosis En las trematodosis intestinales prevalentes en el asociado con necrosis de los bronquiolos. En los
Tricocefalosis masiva +++ Triquinosis ++++ Extremo Oriente, se observa un aumento de los casos más antiguos, el proceso es irreversible y
eosinófilos, especialmente en la infección producida puede producir la muerte. En la biopsia de pulmón
Estrongiloidosis +++ Fasciolosis y otras trematodosis ++++ por Fasciolopsis busld. de estos pacientes, se han identificado microfila­
Anquilostomosis ++ Larva migrante visceral ++++ En resumen, las eosinofilias más elevadas produ­ rias, las cuales serian responsables de esta enfer­
Enterobiosis + Angiostrogilosis abdominal ++ cidas por parásitos se van circunscribiendo, fuera de medad.
Himenolepiosis + Filariosis ++ algunas enteroparasitosis, al grupo de las parasito­ Los trematodos parásitos del hombre constitu­
sis tisulares producidas por helmintos. yen también un grupo cuyo cuadro clínico evolucio­
La migración de larvas de nematodos por el or­
ganismo desencadena habitualmente eosinofilias muy
na con altas eosinofilias. En los trematodos sanguí­
neos o esquistosomas (Schistosoma mansoni, S.
!
elevadas. Esta migración puede afectar especiahnen­ haematobium y S. japonicum), el aumento de eosi­ ::
penias o leucocitosis. Así, por ejemplo, se podrían se observan en las infecciones provocadas por te al puhnón, constituyendo el síndrome de Loeffler, nófilos ocurre principalmente en las etapas tempra­ 1

considerar nonnales eosinofilia de 5% con leucoci­ helminlos tisulares, es decir, en aquellas infeccio­ originado por las larvas de parásitos en que el hom­ nas de la infección, alcanza su máximo en pleno 11
;,
tosis de 20.000, y en realidad en este caso, existe un nes en las que el parásito guarda una estrecha o bre es el hospedero principal (A. lumbricoides, A. período agudo, para declinar en las fonnas crónicas, 1

aumento absoluto de eosinófilos. íntima relación con los tejidos del hospedero. duodenale, N. americanus y S. stercoralis). Ade­ aunque siempre se encuentran cifras elevadas. Este ,:
mismo fenómeno es válido para los trematodos del
En la fase invasora tardía o migratoria de las Entre los nematodos intestinales, la anquilos­ más, el hombre puede ser hospedero accidental de
·¡
helmintosis o al enfrentarse a una reinfección, la
eosinofilia es unifonnemente elevada mientras exista
tomosis y la estrongiloidosis son las que presentan larvas del áscaris del perro y del gato, las que pro­
vocan granulomas inflamatorios en hígado, puhnón,
hígado y del pulmón. En la infección producida por
Fasciola hepatica no es infrecuente encontrar
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eosinofilias más elevadas. En la primera, la eosino­ ¡
una respuesta tisular inflamatoria mantenida. En la filia aparece alrededor de una semana después de la ojo, encéfalo, etc., detenninando un cuadro de larva eosinofilias que sobrepasan el 40% ya en la etapa de
fase crónica se pueden presentar alzas fluctuantes infección y, por consiguiente, durante la migración migrante visceral. En estos casos, además del sín­ invasión del parásito, antes de su ubicación defini­
de los eosinófilos que, en ocasiones, persisten por de las larvas por el organismo. En los casos agudos drome infeccioso y de la hipergammaglobulinemia, tiva en los canalículos biliares. Algo similar se obser­
meses. En la Tabla 62-1, se resumen las parasitosis o reinfectados se presenta hasta 6000-7000 eos/mm3 • puede existir una eosinofilia periférica, que suele va en clonorquiosis y opistorquiosis, infecciones " 1

más frecuentes de Latinoamérica, su ubicación de­ Algo similar ocurre en la estrongiloidosis, en cuyos alcanzar cifras superiores a 8000 eos/mm3 • Esta afec­ que, aunque exóticas en nuestro continente, suelen
finitiva en el huésped y la cuantía de las eosinofilias. cuadros subagudos alcanza entre un 15 y uri 40% ción se presenta muy frecuentemente en niños pre­ encontrarse en los inmigrantes, especialmente en los
A excepción de la isosporosis y de algunos casos cifras que van decreciendo a medida que la infec: escolares, constituyendo una importante causa de orientales. En los trematodos pulmonares, el cuadro
de toxoplasmosis ganglionar, los protozoos cual­ ción se hace crónica. En la ascariasis, cuando el eosinofilias en este periodo de la vida. clínico evoluciona también con una_ eosinofilia alta,
quiera sea su localización no produce11 eosi11ofilia. gusano se encuentra en el estado adulto en el intes­ El examen hematológico de la triquinosis revela, lo cual es de interés en aquellas zonas geográficas
Esto es válido para la amibiasis, giardiasis, balan­ tino, se puede observar una ligera elevación de los habitualmente, una discreta leucocitosis y una de América en las cuales la paragonimosis es endé­
tidiosis, tripanosomosis, paludismo, etc. Práctica­ eosinófilos en un tercio de los casos. Algo similar eosinofilia elevada, con la presencia de eosinófilos mica (Ecuador y Perú).
mente la única protozoosis, cuya infección produce ocurre a la mitad de los pacientes con enterobiosis, juveniles. Son frecuentes las cifras del 40 al 60% y En el curso de algunas parasitosis prevalentes en
un aumento de los eosinófilos, es la isosporosis, la en los cuales se encuentra una eosinofilia también 4.500 eos/mm3• el Oriente, se describe la meningitis eosinofilica,
cual se desarrolla con un cuadro infeccioso inicial discreta, alrededor de 600 eos/mm 3 • En las El quiste hidatídico, a pesar de ser un helminto caracterizada por un cuadro neurológico debido a la
de corta duración, diarrea lientérica y eosinofilia tricocefalosis masivas, caracterizadas por episodios que se desarrolla íntimamente en los tejidos del localización errática en el SNC de helmintos como
elevada. También se ha descrito eosinofilias de hasta disentéricos repetidos, prolapso rectal, anemia y hombre, no produce una eosinofilia elevada cons­ Angiotrongylus cantonensis, G11athosto111a spini­
un 20% en algunos pacientes con toxoplasmosis desnutrición, se presenta una eosinofilia de alrede­ tante; se presenta en un 30% de los casos y, habi­ gerum y Paragonímus westermani. En estos casos,
linfoadenopática, pero lo habitual en ésta, como en dor de 2000 eos/mm3 • Otros nematodos intestinales tuahnente, cuando existe, no alcanza cifras elevadas además de una importante eosinofilia sanguínea, se
otras localizaciones del Toxoplasma gondii, es que de distribución geográfica restringida, como Angíos­ (1O al 20%). Cuando se encuentra una eosinofilia alta observa en el LCR una pleiocitosis con intensa eosi­
cursen sin eosinofilia. trongylus, Capillaria philippinensis, Anisakis spp, en la hidatidosis, es un signo indicador de complica­ nofilia. Como ya se comentó, en el LCR de pacientes
Si se considera en conjunto a los helmintos, se etc., también pueden inducir eosinofilias altas. ciones del quiste (rotura, vaciamiento a serosas, vía con neurocisticercosis también suele observarse
advierte que los del intestino producen una eosino­ En el grupo de los cestodos intestinales, la infec­ biliar, etc.). De lo expresado, se puede concluir que eosinófilos, aunque en una cantidad menor que en
filia discreta, lo que contrasta con los gusanos de los ción provocada por las lombrices solitarias (Taenia la eosinofilia elevada es un signo de poco valor en esas parasitosis exóticas.
tejidos, en los cuales el aumento del número de ellos saginata, T. solium y Diphy!lobothrium spp), indu­ la hidatidosis; si se presenta en un paciente con una En infecciones por artrópodos como la sarna y la
es considerable. De aquí surge un segundo concep­ cen una eosinofilia moderada o, lo más frecuente, tumoración, apoya el diagnóstico, pero su ausencia alergia a picaduras de insectos, se ha descrito tam­
to: las más alias eosi11ofilias de origen parasilario no producen aumento de eosinófilos. En cambio, la no lo invalida. bién incremento en los eosinófilos circulantes de
En las etapas recientes de la filariosis, la eosi- leve a moderada intensidad.
546 PARASITOLOG/A MEDICA
Capítulo 63
Con respecto a cualquier otra parasitosis, hasta debe proceder a tratar al paciente, controlándolo
aquí no nombrada, valen las reglas generales ya con hemogramas periódicos, exámenes copropara­ ENFERMEDADES PARASITARIAS
enunciadas: las protozoosis no producen eosinofi­ sitológicos, prneba de Graham y serologías especí­
lia; en cambio, se presentan en las helmintosis tisu­ ficas para asegurar la cura parasitológica, que en
estos casos redundará en la normalización de los
TRANSMITIDAS POR EL PERRO Y EL GATO
lares del hombre. Es probable que algunas discretas
eosinofilias se deban a infecciones subclínicas pro­ eosinófilos circulantes, puesto que cada vez hay AL HOMBRE
vocadas por helmintos del hombre o por estados mayores evidencias de que la elevación mantenida
larvales de helmintos de animales domésticos, los y sostenida de estas células en el organismo serían
cuales en general, son muy difíciles de diagnosti­ nocivas para algunos parénquimas. HECTOR ALCAINO y TEXIA GORMAN
car.

DIAGNOSTICO Y TRATAMIENTO BIBLIOGRAFIA

La investigación de una eosinofilia de origen Ackennan SJ, LoegeringD, Gleich G. The human Charcot­
parasitario se efectúa basándose en los antecedentes Leyden crystal protein. Biochemical characteristics
clínicos y epidemiológicos del caso y, en algunas and measurement by radioimmunoassay. J Immunol
ocasiones, en los del grupo con el cual vive el en­ l 980; 125: 2118-26.
fermo (brotes epidémicos familiares de triquinosis, Barriga O. The eosinopbils in parasitic infections. Parasitol
fasciolosis, etc.). Orientadoras son las costumbres y al Día 1995; 19: 44-56. Los animales de compañía brindan al ser huma­ ZOONOSIS PARASITARIAS
hábitos alimentarios, la presencia de cachorros en Capron M. Dual function of eosinophils in pathogenesis no innumerables valores que contribuyen a enrique­ CAUSADAS POR NEMATODOS
el hogar, la existencia de diarrea, cuadros pulmona­ and protective immunity against parasites. Mem Inst cer su vida. Es reconocido el beneficio que el con­
res asmatifonnes recidivantes, etcétera. Oswaldo Cntz, Ria de Janeiro,1992; 87 (suppl V): tacto con animales ayuda a prevenir trastornos Frecuentemente se tiende a pensar que los pe­
Estudios practicados a una población con eosi­ 83-89. emocionales propios de la ancianidad y en pacien­ rros o gatos de la casa transmiten la infección por
nofilia del área oriente de Santiago de Chile, de­ Farcet JP, Binaghi M, Kuentz M. Hipereosinophilic tes que sufren de autismo o problemas similares, Enterobius vermicularis (pidulle) y Ascaris lumbri­
mostraron que las enteroparasitosis son responsa­ syndrome with arteritis nnd tuberculosis. Arch Intem contribuyen a proporcionar un mecanismo de co­ coides al hombre. Sin embargo, frente a esta posi­
bles del 45% de las eosinofilias en niños. De éstas, Med 1982; 142: 625-7. municación. Aún más, sin tener que pensar en en­ bilidad es necesario reivindicar a estas especies
Enterobius vermicularis füe demostrado en el 25,8% Grant-Ham G, Meadows A, Gleich G. Chronic eosino­ fennedades, las mascotas en sí proporcionan una animales ya que ellas no son hospedadoras de estos
de los casos. Los histoparásitos lo fueron del 34,8% philic pneumonia. Am J Med 1986; 80: 89-94. gran felicidad a aquellos amos que tienen la facul­ parásitos y, aún más, ni siquiera tienen pidulles
de las consultas y la infección que con mayor fre­ Khoshoo V, Schantz P, Craver R y cols. Dog hookwonn: tad para reconocer en ellos la enorme capacidad de propios de la especie.
cuencia se encontró, fue la larva migrante visceral, A cause of eosinophilic enterocolitis in humans. J estas criaturas para brindar un amor infinito y des­
en un 25% de los casos. Este mismo agente se halló Pediatr Gastroenterol Nutr 1994; 19: 448-452. interesado. Síndrome de larvas migrantcs
en el 20% de los pacientes asmáticos, en tanto que Liu L, Chi J, Upton M, Ash L. Eosinophilic colitis asso­ Tanto el hombre como los animales pueden
tan sólo en el 8,8% de la población presuntamente ciated with larvae of the pinwonn Ellleroblus vermi­ considerarse verdaderos museos ambulantes en cu­ Este cuadro es causado por la migración o pre­
sana. cularis. Lancet 1995; 346:410-412. yas "dependencias" (órganos, cavidades, tejidos, sencia de larvas de nematodos de los animales, fun­
La magnitud de las eosinofilias orientan hacia Mawhorter S. Eosinoplúiia caused by parasites. Pediatric líquidos orgánicos, etc.), se coleccionan enormes damentalmente del perro y/o gato, en los tejidos del
su origen parasitario. Así, la larva migrante visce­ Annals 1994; 23 : 405-13. cantidades de otros seres, entre los que se incluyen: hombre (vísceras, ojos o piel). Estas larvas invasivas
ral, isosporosis, fasciolosis y triquinosis cursan con Noemi1, Schuh I, Herskovic P. Larva migrans visceral en virus, rickettsias, bacterias, hongos, protozoos, hel­ son poco adaptadas a la especie humana y por lo
las eosinofilias de origen parasitario más elevadas niños. Rev Chil Pediatr 1984; 55: 244-7. mintos y artrópodos. Algunos de estos seres infec­ tanto, permanecen inmaduras y sin completar su
(promedios de 4500 eos/mm3). Slovi FT, Abboud CN. Modulation afín vitro eosinophils tan sólo al hombre y otros a una o varias especies evolución
Una vez orientados por los antecedentes clíni­ progenitors: role of accessory cells and interieukins. animales. Sin embargo, existe más de un centenar Según la localización de las larvas se describen
cos, epidemiológicos, la magnitud de la eosinofilia Blood 1985; 66:1072-9. de infecciones que se presentan tanto en el hombre síndromes de larva migrante cutánea (LMC), visce­
y el examen físico, se procede a su investigación Wardlaw AJ. Eosinophils in the l 990s: New perspectives como en los animales vertebrados (zoonosis) y, a su ral (LMV) y/o ocular (LMO). (Véase el Capítulo
etiológica. Por regla general, el parasitólogo prac­ on their role in health and disease. Postgrad Med. vez, son numerosas las infecciones parasitarias que 38: Larvas 111igra11tes).
tica un estudio seriado de las deposiciones, la prue­ J.1994; 70: 536-52. se transmiten en fonna natural y en ambos sentidos Las larvas más comprometidas en producir LMC
ba de Graham y reacciones serológicas para poder Yoichiro H, Ishil A, Owhashi M. !11 l'itro and /11 1•ivo entre los pen·os y/o gatos y el hombre (Tabla 63-1) son las larvas de anquilostomideos de perros y ga­
dar un info1111e global de la posible causa parasita­ induction of neutrophil and eosinophil chemotactic Por lo tanto, en esta asociación hombre-mascota tos, las que por su ciclo biológico son capaces de
ria de la eosinofilia. responsibly Schistosoma japo11ic11111 cercaría. Am J se debe considerar la existencia de las zoonosis, las penetrar la piel del hombre. Las larvas de estos
Una vez encontrado el agente parasitario, se Trop Med Hyg 1985; 34:513-8. cuales pueden ser controladas especialmente si existe parásitos producen en la piel del hombre lesiones
un buen conocimiento y manejo de ellas. A conti­ papulares, rojizas, serpenteantes, dolorosas y muy
nuación se revisará brevemente algunas de estas pruriginosas. La lesión se denomina erupción rep­
zoonosis parasitarias, sin entrar en detalle de aqué­ tante (creeping erupt/011). El principal productor de
llas que en otros capítulos de este libro son tratadas LMC son las larvas de A11cylosto111a braziliense,
más extensamente. Esta revisión se realizará de luego las de A. caninum y muy raramente las de
acuerdo al grupo taxonómico que las origina; es Uncinaria stenocephala. En Chile, nunca se ha
decir, aquellas causadas por nematodos, cestodos, encontrado la primera especie en los perros y, por
protozoos y artrópodos. lo general, la especie más frecuente es la última,
T
548 PARAS/TOLOGIA MEDICA ENFERMEDADES PARASITARIAS TR.4NSM/T/DAS POR El PERRO Y El GATO Al HOMBRE 549

TABLA 63-1 motivo por el cual el LMC es poco común en nues­ El cuadro de brugiosis en el hombre se caracte­
LISTA PARCIAL DE ZOONOSIS PARASITARIAS tro país. riza por linfoadenopatía, linfangitis y una alta eosi­
La mayor causa de LMV y LMO es el Toxocara nofilia. Con intervalos irregulares, se presentan lin­
EN QUE PERROS Y GATOS PUEDEN TENER IMPORTANCIA PARA EL HOMBRE canis, el verme más corriente de los perros. Sin foadenopatías febriles y abscesos estériles que du­
E11fe1111edad del lzambre Agente patógena embargo, el cuadro clínico también pnede ser oca­ ran algunos días. En casos avanzados puede haber
sionado por otros ascarideos como son el To.meara elefantiasis de las extremidades inferiores.
• Toxoplasmosis Taxap/asma gandii cati y el Toxascaris leonina.
En el caso. de T. canis la infección del hombre Infecciones por Dirojilaria. Se distinguen dos
'' Enfermedad de Chagas T1)'pa110s0111a cruzi se produce por la ingesta de los huevos infectantes tipos de dirofilariosis humana: una pulmonar y otra
Amibiasis Entamaeba /zistolytica del parásito. Lós huevos logran su estado infectante subcutánea. La primera se debe aDirofilaria immitis
Giardiasis Giardia dL1ode11a/is en el ambiente aproximadamente 14 días de ser y la segunda a D. tenuis (Estados Unidos), D.repens
excretados por los perros. Este parásito es muy co­ (Africa, Asia, Europa y América del Sur) y otras
Cripstosporidiosis Cryptosporidillm parvum
mún en los perros, ya que prácticamente la totalidad especies de dirofilarias animales.
Leishmaniosis de los cachorros nacen infectados, puesto que el La D. immitis causante de la filariosis cardiaca
visceral Leislzmania donovoni principal mecanismo de transmisión de madre a del perro tiene una extensa distribución en el mun­
cutánea Leislzmanio tropica cachorro es in utero. Las hembras pueden producir do y si bien se localiza en el corazón y arteria
más de 200.000 huevos por día; de tal manera que pulmonar del perro, en el hombre, por lo general,
mucocutánea Leishmania spp. existe una alta contaminación ambiental de patios, ocasiona infecciones en un lóbulo del pulmón dere­
Neumocistosis Pneumocystis ca,inii jardines, plazas públicas, parques, calles, etcétera. cho. Hasta 1981, se habian diagnosticado aproxi­
" Triquinosis Trichinella sp. La mayoría de los casos corresponden a infec­ madamente 80 casos humanos en Estados Unidos,
• Larva rnigrante cutánea Ancylostoma sp.
ciones en niños dados sus hábitos higiénicos y de Australia y Japón. Los vectores de la infección son
convivencia con los perros. En el hígado u otras diferentes géneros de mosquitos (Cu/ex, Aedes,
* Larva migrante visceral Toxocara canis, T. cati. vísceras, la invasión puede causar reacciones granu­ Armigeres etc.).
Capilariosis respiratoria Toxascaris leonina lomatosas, las que en la mayoría de las veces pasan Generalmente las personas infectadas no pre­
Dioctofimosis Capil/aria aerophila clínicamente desapercibidas. Los casos más espec­ sentan síntomas: sin embargo, puede haber tos y
Dracunculosis taculares se producen cuando las larvas se ubican dolor torácico durante un mes o más y, en ocasio­
Diactaplzyma renale
en tejido cerebral y ocular. Las lesiones oculares nes, hemoptisis, fiebre, escalofríos y mialgias. A la
Estrongiloidosis Dracuncllills medinensis son las más frecuentes y pueden ocasionar endoftal­ radiografia pulmonar se observan pequeñas lesio­
Filariosis Stroi,gylaides stercora/is mitis y granulomas retinales. nes periféricas nodulares redondeadas en "fonna de
B111gia, Dirafilaria Los médicos deben conocer estos riesgos para moneda" de unos 10-40 mm de diámetro. El 95%
indicar medidas higiénicas a los niños y prevenir de los pacientes presenta sólo un nódulo, el que
• Dipilidiosis Dipylidillm caninllm las infecciones. Los médicos veterinarios tienen con contiene por lo general, un solo gusano usualmente
• Hidatidosis Echinacaccus granulosus estos antecedentes un argumento más para reco­ muerto o en estado de degeneración. En los exáme­
Difilobotriosis Diphyllobathrium sp. mendar a los propietarios de los perros, la necesi­ nes radiológicos, la lesión puede confundirse con
Cenurosis {Multicepsosis) Taenia mlllticeps, T. seria/is
dad de aplicar tratamientos antiparasitarios a sus tumores malignos.
animales. La D. repens es la que causa la mayoría de los
Esparganosis {Espirometrosis) Spirometra sp. casos de dirofilariosis humana subcutánea. Más de
Trematodosis Clonarchis, Metagomimus, Filaridosis 100 casos se han diagnosticado en varios países de
Opistorchis, Paragoninms, Europa, Asia, Africa y América (Argentina, Brasil,
Infecciones por Brugia malayi. Los gusanos Estados Unidos y Canadá). Las lesiones consisten
Echinastama, etc.
adultos de aproximadamente 2 a 5mm de longitud en nódulos o tumefacciones subcutáneas que se han
Queiletosis Cheyletiellayasgwi viven en el sistema linfático de perros, gatos, pri­ formado alrededor del parásito en cualquier parte
Linguatulosis LingL1atL1/a serrato mates, otros mamíferos y en el hombre. Existen dos expuesta del organismo, siendo en particular más
Sarna sarcóptica Sarcoptes cepas que se diferencian por la periodicidad de sus corrientes alrededor del ojo. Los nódulos pueden ser
microfilarias: una con periodicidad nocturna, para­ dolorosos y a veces migrat01fos. La lesión nodular
Sarna notoédrica Notaedres sita exclusivamente a los seres humanos, y la otra, presenta abundante cantidad de histiocitos, plasmo­
Tungosis Tunga penetrans con una subperiodicidad nocturna, tiene caracteres citos, linfocitos y eosinófilos. Los vectores de esta
Sifonapterosis Ctenocepha/ides, Pu/ex de zoonosis ya que afecta al hombre y a los animales dirofilaria también son especies de mosquitos.
Ixodidosis Rhipicephalus sanguineus, etc. mencionados.
Las infecciones por Brugia zoonótica están li­ Gnathostomosis
Enfermedades no parasitarias transmitidas por parásitos: mitadas a las regiones boscosas y pantanosas en
- Enfermedad de Lyrne donde abundan sus vectores (mosquitos, principal­ El agente principal de la gnatostomosis · es el
- Tularemia mente del género Mansonia) como Indonesia, Ma­ Gnathostoma spinigerum, verme de la pared esto­
lasia peninsular, Tailandia, sur de Vietnam y algu­ macal del gato, perro y féliqos silvestres. Este ne­
(") Infecciones más importantes para el hombre. nos focos en Filipinas. Se han descrito algunos ca­ matodo, en parte de su ciclo evolutivo, requiere de
sos en Estados Unidos y en Colombia. peces de agua dulce o ranas, los que al ser ingeridos
550 PARASJTOLOGJA MEDICA ENFERMEDADES PAR.-JSITARJAS TR.<NSM/T/D.·IS POR EL PERRO l' EL G.-lTO AL HOMBRE 551

por los animales o por el hombre producen su infec­ representados por el perro y el gato, contribuyen a los mataderos y menor productividad en los anima­ ducen molestias digestivas, tales como dian-ea có­
ción. La mayoría de los casos humanos se producen mantener la infección en el ámbito del hombre, ya sea les afectados, es que en muchos lugares del mundo licos, irritabilidad, apetito capiichoso y abddmen
en Tailandia y Japón. El parásito emigra, por lo ge­ por que sus cadáveres pueden ser consumidos por se llevan a cabo programas de control (Nueva globuloso. La eliminación de proglótidas maduras
neral, por diversas partes del cuerpo del hombre, ratas o cerdos, o bien porque sus carnes en algunas Zelandia, Tasmania, Chipre, Uruguay, Chile, Ar­ de gran movilidad en los excrementos es el signo
frecuentemente desplazándose bajo la piel, donde oportunidades podrían ser consumidas directamen­ gentina, Perú, islas Malvinas, etc.). Los programas más llamativo.
elaboran túneles cutáneos profundos que cambian te por el hombre. Esto último no debe extrañar ya que se elaboran en base a los antecedentes epidemioló­ Spirometra eri11acei en Australia y Spirometra
de lugar, similares a la larva migrante cutánea. Las algunas personas por su pobreza o propia voluntad gicos que operan en cada lugar, contemplándose mansonoides en América del Norte, son pseudo­
localizaciones más graves, pero raras, se encuentran consumen estas carnes. Aún más, algunas personas básicamente medidas de educación sanitaria, legis­ phylideos, parásitos de pe1rns y gatos con ciclo si­
en el cerebro y en el ojo. podrían consumir carnes de perro o gato en forma lación apropiada, adecuados sistemas de revisión milar al del Diphyllobothri11111. Se diferencian en
involuntaria, al consumir alimentos preparados por sanitaria y de destrncción de vísceras infectadas en que a los plerocercoides se les llama esparga110, los
Capilariosis pulmonar comerciantes inescrupulosos. mataderos, así como tratamientos periódicos de pe­ que parasitan una amplia vmiedad de mamíferos,
En estudios realizados en perros y/o gatos de rros debidamente identificados con prazicuantel. reptiles y anfibios que al ser consumidos por pe1rns
La capilariosis puhnonar es producida por la Chile, se han encontrado infecciones que varían entre y gatos, maduran en sus yeyunos. Sin embargo, si
Capil/aria aerophila la que se localiza en tráquea y un 1,56 y 11,65%, lo que significa un real peligro para Cenurosis son ingeridos por el hombre, los esparganos migran
bronquios de perros, cánidos silvestres y muy rara­ el hombre consumir sus carnes. principalmente al tejido subcutáneo y musculatura,
mente en gatos y otros mamíferos. Este parásito Son zoonosis producidas por los estados larva­ provocando inflamación, urticaria, edema y eosino­
existe en numerosos países dentro de los cuales se ZOONOSIS PARASITARIAS rios de cestodos de los perros. Los principales son filia. También el hombre puede infectarse al consu­
cuenta a Chile. En el hombre se han descrito algunos CAUSADASPORCESTODOS Taenia 11111/ticeps y Taenia seria/is, cuyos huevos mir accidentalmente los primeros hospederos inter­
casos correspondiendo en su mayoría a la ex U.R.S.S. embrióforos son ingeridos por hospedadores inter­ mediarios que al igual que el Diphyllobothri11111,
En las infecciones puhnonares se presentan sínto­ Hidatidosis mediarios, dando lugar a la fonnación de estados son pequeños crutáceos.
mas asmatiformes con tos, expectoraciones mucoides larvales en forma de vesículas llenas de líquido con Otros cestodos del intestino delgado de pe1rns y
o a veces sanguinolentas, fiebre, disnea y una El agente causal corresponde a cestodos del múltiples escólices invaginados, llamados Coe1111- gatos que pueden parasitar al hombre son los Me­
eosinofilia moderada. En biopsias, se observan le­ género Echinococcus, siendo E. granulosus la espe­ r11s o Multiceps. Estas vesículas pueden llegar a socestoides /i11eat11s y M. variabilis. El primer hués­
siones granulomatosas. cie de mayor distribución mundial, principahnente medir más eje 12 cm de diámetro. ped intermediario no se conoce; sin embargo, pro­
presente donde existen zonas agrícolas y ganaderas El estado larvado de T. nwlticeps es el Coenurus bablemente sea un artrópodo coprófago. Los segun­
Triquinosis de importancia. Se presenta desde el Artico por el cerebralis, el cual se ubica en el encéfalo y médula dos huéspedes intennediarios son anfibios, reptiles,
Norte hasta Tierra del Fuego por el Sur, encontrán­ espinal, primariamente de ovejas, produciéndoles roedores, aves y ocasionalmente pe1rns y gatos, los
En los países latinoamericanos y europeos, la dose especiahnente en todo el litoral Mediterráneo, un cuadro neurológico que en los campos se conoce que albergan en sus serosas, plerocercoides llama­
principal fuente de infección por Trichinella sp. para Oceanía, Artico y América Latina. Otras especies con el nombre de "torneo" ya que los animales dos tetratiridiu111 que tienen la particularidad de
el hombre, la constituye el consumo de carne cruda como E. multilocularis y E. oligarthrus tienen una además de presentar vértigos, giran sobre sí mis­ multiplicarse asexuadamente. Si el perro y gato y,
o semicocida de cerdo o de sus subproductos. En distribución mucho más restringida, en países del mos. En el caso de T. seria/is, su estado larvario el ocasionalmente, el hombre, ingieren tetratiridium
otras regiones del mundo los animales silvestres hemisferio Norte y en localidades de Centro y Suda­ Coerwrus seria/is se localiza en el tejido subcutá­ se desarrollaría el cestodo en su intestino hasta al­
juegan un rol muy importante. Así, en Africa se mérica, respectivamente. neo e intermuscular de lagomorfos. canzar el tamaño de unos 40 cm de largo. En los
conocen brotes debido al consumo de carnes de El ciclo doméstico de E. granulosus involucra al Para el hombre la forma cerebral es la más gra­ pocos casos humanos, provoca trastornos digesti­
jabalíes y en Hawai y Alaska se reconocen como los perro como huésped definitivo y ovinos, bovinos, ve, manifestándose con signos de hipertensión vos, dolores abdominales, diarrea y eliminación de
principales responsables a los cerdos silvestres y cerdos, equinos, caprinos y camélidos como los intracraneal dificil de distinguir de una hidatidosis proglótidas en los excrementos
osos, respectivamente. En Groelandia en 1947, se huéspedes intermediarios, donde se ubica el estado o neurocisticercosis cerebral. Afortunadamente se
registró una epidemia con 300 enfermos de los cuales larvario o hidátide en diveros órganos, especiahnen­ han descrito pocos casos en el mundo. La cenurosis ZOONOSIS PARASITARIAS
33 fallecieron. El origen de la epidemia no fue com­ te hígado y puhnón. En forma accidental, el hombre subcutánea producida por C. seria/is es más benig­ CAUSADAS POR PROTOZOOS
probado, pero en un brote posterior se concluyó que se introduce en el ciclo de transmisión ocasionando na y escasa, ocasiona quistes de diversos tamaños.
la fuente de infección fue el consumo de carne de un importante cuadro clúiico de pronóstico grave. Además, en Africa se han descrito más de 25 casos En las especies menores se presentan algunas
morsa. Ello ocurre cuando el hombre ingiere los huevos del humanos por Coem1111s brazmi, estado larvario de infecciones protozoarias que pueden ser comparti­
otro cestodo del perro, el que produce quistes sub­ das también por el hombre; o bien, infecciones
. En C?hile, el cerdo juega el principal papel epide­ cestodo, ya sea por el consumo de verduras conta­
cutáneos que semejan lipomas o quistes sebáceos. parasitarias en que las especies menores juegan un
lillológ¡co. Ellos contraen la infección al consumir minadas con las heces de perros infectados o bien
desperdicios en que se encuentran trozos de carne por el contacto directo con perros infectados, usual­ papel importante como reservorios de infección. En­
o cadáveres de otros animales que contienen quistes mente cuando es objeto de caricias, principahnente Otras cestodosis tre las zoonosis protozoarias más conocidas, sin
de triquinas, ya que las larvas sobreviven durante por parte de niños. Esta última modalidad de infec­ duda, la toxoplasmosis juega un destacado lugar,
bastante tiempo a la putrefacción. Otra fuente de ción tiene mayor probabilidad de ocurrir en ambien­ Uno de los.cestodos más frecuentes de los perros siguiéndole otras como giardiasis, criptosporidiosis
infección para el cerdo y, tal vez, la más importante tes rurales en donde los perros son alimentados con y gatos es el Dipy!id/11111 ca11i1111111, parásito del in­ e infecciones por T1ypa110s0111a cnd, Leish111a11ia
en el país, es el consumo de ratas infectadas. Los vísceras de animales que contienen quistes testino delgado de estos animales y que tienen como sp, Balantidi11111 co/i, E11ta111oeba, Sarcocystis, et­
cerdos alimentados en basurales tienen mayores hidatídicos. hospederos intermediarios, principalmente a las cétera.
posibilidades de infectarse, ya que es ahí donde más Dada la gravedad que encierra esta zoonosis pulgas. En el hombre se han descrito varios casos de
abundan las ratas y cadáveres de otros animales. La además de ocasionar grandes pérdidas económicas infección, correspondiendo en su mayoría a lactan­ Toxoplasmosis
principal fuente de infección para las ratas es el debido a los gastos en que se debe incurrir para tes y niños de poca edad. Los niños se infectan al
consumo de carne de ratas muertas. proteger y restaurar la salud del hombre, así como consumir accidentalmente pulgas infectadas con Causada por Toxoplasma gondii, esporozoo cos­
Entre los animales domésticos, los carnívoros, también por concepto de decomisos de órganos en cisticercoides de D. cani11w11. Las infecciones pro- mopolita el cual se encuentra en numerosas espe-
552 PARASITOLOGIA MEDICA ENFERMEDADES PARASITARIAS TRANSMITIDAS POR EL PERRO Y EL GATO Al HOMBRE 553

cies de mamíferos (roedores, lagomotfos, insectí­ con la apatición de anticuerpos, los que comienzan fácil, debido a las inespecificidad de los signos y a cocida o después de haberse congelado a -20º C (se
voros, carnívoros, marsupiales, primates, incluyen­ a detectarse entre los 9 y 12 días, alcanzando nive­ que pueden coexistir otras enfermedades. Los mé­ destruyen los quistes tisulares) y las verduras que
do al hombre) y aves (gallinas, palomas y canarios). les óptimos al día 25. todos directos de diagnóstico son menos emplea­ se consumen crudas deben ser lavadas en forma
En su ciclo presenta una fase sexuada que conduce Los gatos que sobreviven a la infección, quedan dos e incluyen la demostración del parásito en te­ prolija (para evitar la contaminación con ooquistes).
a la forniación de ooquistes y que se produce en el como portadores y pueden tener períodos cortos de jidos o líquidos orgánicos que luego se someten a Se recomienda en el caso de la mujer embarazada y
intestino de los gatos (ciclo entérico) y una fase eliminación de ooquistes, coincidiendo con nuevas tinción, inoculación de animales de Iaboratotio o en huéspedes inmunológicamente deprimidos, un
asexuada que se caracteriza por la fonnación de infecciones o con reactivación de una toxoplasmo­ cultivos. Los métodos indirectos son los más em­ cuidado especial con la manipulación y consumo de
quistes en diversos órganos especialmente cerebro y sis latente. Se ha demostrado que una supetinfec­ pleados y se basan en la detección de anticuerpos carne semicruda o cruda, así como evitar el contacto
músculos y ocurre en los huéspedes intennediarios ción posterior con un coccidio intestinal, Jsospora o de antígenos, demostrables éstos por medio de con excrementos de gatos o con gatitos jóvenes.
incluyendo una gran va1iedad de mamíferos y aves fe/is, gatilla una reactivación de la excreción de técnicas inmunoliistoquimicas. Entre las técnicas Con respecto a los gatos, es necesario alimentarlos
(ciclo extraentérico). (Véase el Capítulo 29: Toxo­ ooquistes de toxoplasma. Sin embargo, esto no es que detectan anticuerpos las más empleadas son la con carne o vísceras cocidas, debiéndose además
plasmosis) tan importante, puesto que en la naturaleza los gatos inmunofluorescencia indirecta y la prueba de ELISA. recolectar y eliminar (enterrando profundamente)
Los mecanismos de transmisión del T. gondii se infectan tempranamente con L fe/is manteniendo La significancia de los títulos de anticuerpos en las diatiamente sus excrementos.
son fundamentalmente tres: feca/ismo, camivoris- cie1ta inmunidad para reinfecciones bajas y repeti­ diferentes especies, es un tema controvertido puesto
1110 y lransmisión congénita. El primer caso, se das. La administración de corticosteroides en forma que existe una gran vatiación de ellos, lo que no Giardiasis
ingieren ooquistes a través de alimentos contamina­ prolongada, también puede determinar la reexcre­ permite establecer con absoluta segutidad si una
dos (verduras mal lavadas) o a través del contacto ción de ooquistes. infección toxoplásmica está en fase activa o aguda Causada por un flagelado extracelular, Giardia
con tierra contaminada con excrementos de gatos. Desde el punto de vista epidemiológico, el gato o en fase estable o crónica. Es por ello que se spp. de cuerpo pitiforme y simetría bilateral. Se han
Este mecanismo es común en países en vías de peligroso para la infección humana directa, es aquél recomienda que para establecer un diagnóstico descrito alrededor de 40 especies en \lila gran varie­
desarrollo y especialmente en niños. El camivorismo menor de 3 a 4 meses de edad aún no expuesto a la certero de enfermedad se debiera evidenciar una dad de huéspedes mamíferos, aves y reptiles. Tradi­
se produce al consumir carne cruda o insuficiente­ infección, puesto que los mayores ya se habrían alza de título al doble o de 4 veces, en muestras de cionalmente se ha postulado que Giardia posee \lila
mente cocida que contiene quistes toxoplásmicos en infectado, habiendo ocunido ya la elevada excre­ sangre sedadas con una o dos semanas de interva­ gran especificidad de huésped y es así que se han
su interior. Esta sería la fonna de infección más ción de ooquistes propia de la ptimoinfección. Sin lo. denominado especies según el huésped en que han
común para la población adulta y los países desmTo­ embargo, no se debe olvidar la larga persistencia de En el gato, el diagnóstico reviste ciertas conno­ sido encontradas (G. canis, cati, bovis, muris, etc.),
llados. ooquistes viables en el ambiente. taciones que deben ser consideradas: se emplean, muchas probablemente no válidas. Este es un tema
Se ha demostrado que las especies ovina y porcina La toxoplasmosis clínica del gato parece ser muy especialmente en estudios epidemiológicos, las prue­ de controversia que requiere mayor estudio, espe­
son responsables de la mayor cantidad de infeccio­ poco frecuente. La mayoría de los casos han sido bas serológicas que pesquisan anticuerpos y los cialmente en relación a la transmisión cruzada de la
nes por esta vía, ya que sus quistes son numerosos descritos después de la muerte del animal. El ciclo exámenes coprológicos que permiten visualizar infección entre las especies, ya que la imp01tancia
y viables, no así a través del consumo de carne de entérico del toxoplasma muy raramente puede oca­ microscópicamente a los ooquistes de T.gondii. No epidemiológica de este protozoo puede ser mayor al
bovinos y equinos los cuales tienen menor impor­ sionar signos clínicos. Cuando éstos se observan, obstante, cuando se pretende descartar al gato como plantearse el peligro de la transmisión al hombre. Se
tancia epidemiológica, debido a su baja infección y más bien se deben a la proliferación y diseminación fuente de infección en un hogar, o cuando se sos­ ha llegado a sugetir que sólo existirían dos especies
a que los quistes no persisten por mucho tiempo en de los toxoplasmas en tejidos, presentándose ano­ pecha de un caso clínico, es recomendable conside­ de acuerdo a díferencias de tamaño y morfológicas:
los tejidos de estas especies. En cuanto a la trans­ rexia, decaimiento, disnea, tos, neumonía, ictericia, rar las otras fuentes de infección humana (vía con­ G. muris (ratón, rata, hamster) y G. duodenale (co­
misión congénita, es una forn1a de transmisión muy vómitos, fiebre y encefalitis ocasional. Estas mani­ génita y carnivotismo), que pueden haber estado nejo, chinchilla, hombre, probablemente vacuno, pe­
importante en la especie humana, pero también se festaciones pueden persistir por pocos días o bien involucradas. La interpretación de los métodos diag­ rro, gato, etc.). Además de estudios morfológicos se
observa en especies animales (ovinos, cerdos, pe­ prolongarse por meses. Aunque, probablemente, no nósticos debe ser hecha con cautela y para ello es requieren estudios bioquímicos como es el análisis
rros, ratas, ratones, hamsters, cobayos y, raramente, es común, se ha desctito un cuadro de toxoplasmo­ importante recordar las siguientes consideraciones: de diferencias en el patrón de zimodemas de los
en gatos). Ella ocurre cuando un huésped no infec­ sis ocular en que se presenta uveítis tanto en la a) Los anticuerpos aparecen semanas después · aislados para esclarecer si se trata de especies dis­
tado previamente, se infecta durante la gestación cámara anterior como posterior del ojo y retino­ de que se han excretado los ooquistes; es decir, tintas.
causando muerte embrionaria temprana con reab­ coroiditis. cuando el mayor peligro de contaminación ya ha La ubicación de Giordia spp. es el intestino
sorción, muerte fetal, aborto o muerte perinatal. Los También en perros es muy poco frecuente la pasado. delgado, pudiendo ubicarse en sus diferentes por­
cuadros clínicos de toxoplasmosis congénita han toxoplasmosis clínica. Los que podrían afectarse b) Es posible que un gato presente un título alto, ciones de acuerdo a vmiaciones dependientes del
sido poco desctitos en los animales y se refieren más son los menores de 6 meses de edad, ya que en lo que puede estar indicando la existencia de una huésped y de la dieta. Se ha aislado el organismo en
fundamentalmente a ovinos de Australia, Nueva los adultos la infección es generalmente asintomá­ infección crónica anterior. perros desde el duodeno hasta el íleon. En el caso de
Zelandia, lnglate1rn e Irlanda, donde el problema tica. Entre los factores asociados a la mayor o me­ c) Una abundante eliminación de ooquistes sólo los gatos, los trofozoitos se encuentran tanto en el
ocasiona un fuerte impacto económico. Otras vías nor gravedad del cuadro, se mencionan la edad y la se produce en la primoinfección (que ocurre antes de intestino delgado como en el colon. Una dieta alta en
potenciales de transmisión pueden ser a través de presencia de infecciones concomitantes simultáneas. los 3 meses de vida del gato) y su patencia es breve carbohidratos puede favorecer la colonización de las
transfusiones sanguíneas, trasplante de órganos, Las infecciones virales como el distémper pueden de sólo 3 a 19 días. En las siguientes infecciones hay partes anteriores del intestino delgado. Ellos se
accidentes de laboratorio, etcétera. disminuir la resistencia, determinando la reactiva­ una escasa o nula excreción de ooquistes, debiendo multiplican por fisión binmia y por un mecanismo
En la gran mayoría de los casos, los gatos ad­ ción de toxoplasmas presentes en los tejidos. Así, hacerse una identificación de los ooquistes elimina­ desconocido, se enquistan y se eliminan por los
quieren la toxoplasmosis a través del carnivotismo, en Inglaterra y Austtia, se observó que el 99% de dos, lo que requiere de un laboratorio especializado, excrementos durante 1 a 2 semanas después de la
lo que sucede en los tres ptimeros meses de vida. los casos clínicos de toxoplasmosis se presentan en pues debe establecerse el diagnóstico diferencial infección, pudiendo también eliminarse trofozoitos,
Esta primoinfección origina una enonne cantidad conjunto con distémper. Los signos clínicos en el con otros coccidios del gato (Jsospora spp.). los que sobreviven por poco t j,empo. Los quistes, en
de ooquistes (más de 100.000 por gramo de excre­ perro pueden ser· neuromusculares, respiratorios y El control de la toxoplasmosis se basa en el co­ cambio, son relativamente resistentes y pueden so­
mentos) con un peak entre el quinto y octavo día. La gastrointestinales. nocimiento de las tres vías de transmisión más fre­ brevivir por meses, siempre que exista suficiente
excreción de ooquistes disminuye simultáneamente El diagnóstico clínico en los animales no es cuentes, es decir, se debe consumir la carne bien humedad.
554 PARASITOLOGIA MEDICA ENFERMEDADES PARASITARIAS TRANSMITIDAS POR El PERRO l' EL GATO AL HOMBRE 555

Generalmente las infecciones son asintomáticas. brotes por consumo de agua en que la población de requieren de un conjugado anti lgG de la especie El dia �óstico direct ? se basa en el hallazgo de
De haber síntomas, la diarrea es lo más frecuente, castores locales estaba infectada con Giardia spp. animal estudiada. los amastigotos en macrofagos de las lesiones cutá­
presentándose ésta en forma aguda y por un corto Sin embargo, aún se especula si giardiasis es o no En relación al T. rangeli, se diferencia morfoló­ neas o aspirados de los ganglios linfáticos u otros
.1 una zoonosis ya que los estudios epidemiológicos gicamente de T. cncci porque sus tripomastigotos tejidos. Se ha demostrado que la administración de
periodo, en forma intermitente o bien crónica. Los
excrementos se observan pálidos, malolientes, con tienen aún limitaciones para discriminar si la fuente son más largos (27-32 µm en lugar de 16-22 µm), corticosteroides determina un aumento de parásitos
mucus y grasa en gran cantidad (esteatorrea). El de infección es de origen animal o humano. Un en­ presentan una membrana ondulante más ancha y el lo que favorece su diagnóstico. Este hecho explica
apetito disminuye por lo que se produce también foque conservador aconseja actuar frente a esta cinetoplasto es más pequeño. porqué la enfermedad puede permanecer oculta por
disminución de peso. Se ha demostrado que en las infección como si se tratase de una zoonosis, mien­ meses, bastando un proceso que cause inmuno­
infecciones intensas, la interferencia en la absorción tras aún no se dilucide esta controversia, recomen­ Leishmaniosis supresión para que se determine la multiplicación y
de grasas puede dar lugar a una deficiencia de vita­ dándose disminuir este riesgo mediante el tratamien­ diseminación del protozoo en los diversos tejidos.
minas liposolubles lo cual se refleja en una piel seca to de los animales de compañía que demuestren la Esta enfermedad zoonótica es causada por flage­ El tratamiento en los perros es similar al del hu­
y deterioro del pelaje del animal. Su acción se refiere infección. lados del género Leishmania y ella se presenta en mano (compuestos de antimoniales pentavalentes y
al número que interfiere en la absorción y por acción diversos países de América, Afríca, Oriente, países ocasionalmente pentamidina, anfotericin B,
inflamatoria directa de la mucosa. Se discute si la Enfermedad deChagas mediterráneos, etc., no existiendo en Chile. Los pa­ ketokonazol durante períodos prolongados). Debido
digestión anómala o la malabsorción se deban a un o tripanosomosis americanas rásitos de este género se presentan bajo dos formas: a su dificultad y costo, así como el riesgo de infec­
simple bloqueo mecánico o si operan otros mecanis­ los amastigotos, redondos de 2,5 a 5 µm en los ción para los dueños, se justifica recomendar la
mos bioquímicos o inmunológicos. No obstante, se Es causada por el protozoo flagelado TIJ,panoso­ tejidos de huéspedes vertebrados (especialmente eutanasia del perro afectado.
pueden encontrar quistes de Giardia spp., en perros ma cruzi el cual puede infectar a diversas especies macrófagos) y los promastigotos en los vectores. Se El control de esta zoonosis se basa en el control
y gatos sanos y su mera presencia no es sinónimo incluyendo al hombre, perros y un amplio rango de han descrito numerosas especies y subespecies en de las moscas Phlebotomus o Lutzomyia involu­
de enfermedad. Sin embargo, en algunos individuos, mamiferos domésticos y silvestres del continente diversos huéspedes incluyendo al hombre, perros, cradas en su biología, Jo cual es dificil. El contacto
Giardia spp. puede ser patógena, variando la res­ americano. Como su nombre lo indica, su distribu­ roedores, lagartijas, etc., y su taxonomía aún está con lesiones de perros infectados debe evitarse por
puesta clínica según la virulencia de la cepa actuante ción se extiende desde Estados Unidos hasta la zona sometida a discusión. Las diversas presentaciones la posibilidad de transmisión.
y factores propios del huésped (edad, respuesta centro sur de Chile y Argentina. Esta infección clínicas de la enfermedad se conocen con los nom­
inmunitaria, etc.). zoonótica es vectada por insectos hemípteros de la bres de Jeishmaniosis cutánea, Jeishmaniosis visceral, Otras infecciones protozoarias
El diagnóstico se realiza mediante la observación subfamilia Triatominae, habiéndose descrito muchas kala-azar, fiebre dum-dum, espundia, uta, etc. (Véa­
Existen otras infecciones protozoarias tr�tadas
de los trofozoitos o quistes en frotis teñidos. El especies y subespecies, siendo las más importantes se el Capítulo 27: Leishmaniosis).
T1iatoma infestans (Argentina, Bolivia, Brasil, Chile en otros capítulos, que son de menor trascendencia
método de elección para concentrar los quistes es la Su transmisión es a través de un insecto díptero
y Perú),Panstrongylus megistus (Brasil), T. dimidia/a en las especies menores, pero que también son com­
flotación con sulfato de zinc, ya que esta solución es (subfamilia Phlebotominae, sandjlies de los géneros
(América central) y Rhodnius prolfa:us (Colombia y Phlebotom11s en países asiáticos y africanos y partidas en la naturaleza con el hombre. El papel de
la más adecuada porque no produce distorsión de
Venezuela). (Véase el Capítulo 28: Enfermedad de L11tzomyia en países del Nuevo Mundo). La mosca las mascotas es la de ser reservoríos que contnbu­
los quistes y es un método también útil para diag­
C/zagas). regurgita promastigotos cuando pica al huésped para yen a la mantención y diseminación de las formas
nosticar huevos de helmintos. La aspiración y en­ infectantes en el ambiente. Tal es el caso de la
doscopia duodenal son invasivos y no se justifican Se han realizado pocos estudios sobre la sinto­ alimentarse de sangre, las que invaden el sistema
matología en animales, describiéndose en perros un amibiasis, en que el perro puede ser huésped de
en perros. Se describe la implementación de una reticuloendote!ial multiplicándose bajo la forma de
cuadro similar al del humano con una forma aguda Entamoeba hystolitica, pero su papel en la epide­
prueba de ELISA para detectar antígenos de Giardia amastigoto, provocando diversas alteraciones en
(fiebre, compromiso cardíaco, debilidad, anemia, órganos y piel, con compromiso de la respuesta miología de la enfermedad humana no es de trascen­
spp. en heces humanas, la que seria de gran sensi­
esplonomegalia, así como convulsiones y parálisis dencia, identificándose esta situación en que más
bilidad y especificidad, no obstante su aplicación en inmunitaria de los huéspedes afectados. El perro
posterior en gatos) y una forma crónica. Como con­ bien el ser humano le proporciona infección al perro.
perros ha demostrado resultados inferiores que los constituye un importante reservorio para la infec­
secuencia de la insuficiencia cardíaca se presenta En el caso de la balantidiosis, se ha comprobado que
obtenidos con la flotación en sulfato de zinc. ción humana y la especie que los afectaría es
ascitis y hepatomegalia en perros. Si sobreviven la los cerdos juegan un papel importante en la disemi­
La infección humana es generalmnte atribuida a Leishmania donovani. La transmisión también pue­
fase aguda de la enfermedad pueden desarrollar una nación de los quistes deBalantidi11m coli. La impor­
la contaminación del agua, ya que los filtros y los de ocurrir a través de transfusiones sanguíneas y
miocarditis crónica acompañada de dilatación car­ existe también evidencia de que el contacto directo tancia del perro en la epidemiología de Cryptospori­
lechos de sedimentación de las plantas de tratamien­
díaca. di11m parvum, es mínima, dado que en especies
to de aguas no siempre eliminan a Giardia spp., y los con la lesión de un perro, permite transmitir la infec­
i quistes son capaces de soportar concentraciones de
cloro muy superiores a las aceptables en el agua de
Para el diagnóstico, se utiliza el examen microscó­
pico directo de sangre que permite la detección del
ción a una persona.
La enfermedad presenta un periodo de incuba­
menores su frecuencia suele ser baja o nula y su
importancia clínica no es tan clara. Finalmente, con
parásito en sangre, el cual es útil cuando la parasitemia respecto a la sarcosporídiosis, los perros y los gatos
bebida. Las epidemias en guarderias pueden ser ción muy largo (3 semanas a 18 meses) y en perros
es elevada (fase aguda de la infección). También existe se caracteriza por caquexia, fiebre, linfoadenopatía, juegan el mismo papel epidemiológico que el hom­
producto de un contacto directo interpersonal. En el bre, al ser huéspedes definitivos carnívoros de di­
caso de los perros y gatos, es probable que la infec­ el xenodiagnóstico para el cual es necesario contar esplenomegalia, anemia, hipoalbuminemia, trombo­
con triatomíneos criados en un laboratorio, libres de versas especies del género Sarcocystis y, por lo
ción se origine por el contacto directo oral-fecal, citopenia, Júperglobulinemia, azotemia y proteinuria.
infección, los cuales se contactan con el huésped En perros no se presenta la clara división de los tanto, estas especies animales no ofrecen un riesgo
pero también puede operar el mecanismo atribuido a para la salud humana.
contaminación del agua de bebida, como sucede en sospechosos para que succionen sangre y después cuadros clínicos de leishmaniosis cutánea y visceral.
las infecciones humanas. Es así como se han descri­ de un período (30-60 días) se examinan las heces de Si bien en la especie humana son más raras las alte­ ENFERMEDADES CAUSADAS
to algunos brotes epidémicos originados por el con­ las vinchucas en el microscopio. Además, se pueden raciones oculares, éstas son relativamente comunes PORARTROPODOS
sumo de agua tanto no tratada como clorada, conta­ emplear métodos. indirectos como es la detección de en perros, describiéndose conjuntivitis, queratitis,
minada con Giardia spp., de origen humano o animal anticuerpos mediante pruebas de hamaglutinación uveítis anterior, blefaritis, retínitis. También se pue­ Las pulgas, ácaros y los piojos son sin duda los
(perros, gatos, bovinos, ovinos, caprinos, etc.). Un indirecta, inmunofluorescencia indirecta y ELISA. den presentar alteraciones cutáneas con caída de ectoparásitos más comunes en perros y gatos, en
origen animal ha sido demostrado sólo en algunos Estas dos últimas son las más eficientes aún cuando pelo. ese mismo orden de frecuencia.
556 PARASITOLOGJA MEDICA ENFERMEDADES PARASITARIAS TRANSMITIDAS POR EL PERRO Y EL GATO AL HOMBRE 557

Pulgas El otro cuadro de sarna, de menor frecuencia, es Pentastomosis Dubey J. Toxoplasmosis in dogs. Canine Pract 1985; 12:7-
la sarna sarcóptica, causada por Sarcoptes scabiei, 28.
Las pulgas, a diferencia de los piojos, son ines­ ácaro también microscópico (de aproximadamente La Linguatula serrato se suele encontrar en el Dubey J. Toxoplasmosis in cats. Feline Pract 1986; 16:12-26.
pecíficas para alimentarse, es decir, una pulga del 300mg), cuya hembra ovígera horada la epidermis hombre, en quistes que contienen el estado ninfa!, Frenkel J.K. Toxoplasmosis in human beings. J Am Vet
perro puede atacar al hombre y viceversa. Las espe­ para depositar sus huevos en las galerías. Esta sama especialmente en los ganglios del mesenterio y, Med Assoc 1990; 189:240-8.
cies que infectan al perro y gato son Ctenocepha/ides es altamente contagiosa no existiendo predilección ocasionalmente, en otras vísceras. El parásito adulto Gorman T. Toxoplasma gondii y toxoplasmosis. Mo­
canis, C.felis y Pu/ex irritans, siendo ésta la especie por edad o sexo. Es muy posible que ocurra el con­ de forma externa parecido a un helminto lingüiforme, nografías Med Vet 1993; 15:17-32.
propia del hombre. En forma ocasional es posible tagio al ser humano a través del contacto directo con segmentado en anillos, pertenece a un grupo de Gorman T. La criptosporidiosis: una nueva entidad clíni­
que Echidnophaga gallinacea, especie propia de perros u otros animales infectados, causando lesio­ artrópodos que parasita las fosas nasales de los ca. Monografías Med Vet 1987; 9:52-60.
las aves, ataque a perros. Así también, se suelen pre­ nes de la piel consistentes en pequeñas pápulas en perros. Sus huevos son esparcidos por los estornu­ Georgi JR, Georgi ME. Parasitología en clfnica canina.
sentar casos de perros infectados con Tunga lugares donde la piel es más fina, las que pueden dos de éstos y diseminados por el suelo, los pastos Interamericana, McGraw-Hill, México: 1994.
penetrans ("pique, nigua"), pulga propia de los cer­ aumentar debido al prurito concomitante. Este cua­ y plantas, de donde los ingieren animales herbívo­ Kasprzak W, Pawlowsld Z. Zoonotic aspects of giardiasis:
dos, cabras y del hombre, la cual tiene la particulari­ dro clínico es de menor intensidad que cuando se ros, sus hospedadores intermediarios. a review. Vet Parasitol 1989 32:101-08.
dad de fijarse a la piel generalmente de las patas. La presenta la variedad de S. scabiei propia del hombre. Kosek WI, Reyes Ma, Ehnnan L y cols. Enzootia Brugia
tungiosis canina cursa con inflamación y dolor, pu­ Estos problemas suelen observarse con cierta fre­ infection in a two year old Colombian girl. Am J Trop
diendo presentarse infecciones secundarias. cuencia en profesionales y alumnos médicos veteri­ BIBLIOGRAFIA Med Hyg 1984; 33:65-9.
El control de las pulgas es dificil, requiriéndose narios que obviamente se encuentran en mayor ries­ Martins Cap, Guerrant Rl. Cryptosporidium and criptos­
tratar a los huéspedes infectados y al mismo tiempo go al contactar con animales afectados. Aftandelians R, Raafat F, Taffazoli M, Beaver PC. Pul­ poridiosis. Parasitol Today 1995; 11 :434-6.
proceder a desinfectar el ambiente rigurosamente ya Existen otros ácaros propios de perros y gatos de monary capillariasis in a child in Iran. Am J TrapMed Noble E, Noble G, Schad G, Macinness A. Parasitology.
que allí se encuentran los huevos, larvas y pupas. menor importancia en cuanto al riesgo de infección Hyg 1977; 26:64-71. The biology of animal parasites. Philadelphia: Lea
Ello se logra con el aspirado de las habitaciones y la al hombre, como es el caso de ácaros de género Alcaíno H, Gorman G, Larenas Y. Fauna endoparasitaria and Febiger, 1989.
aplicación de productos insecticidas. Cheyletiella que ocasionalmente causan al hombre del gato doméstico en una zona urbana marginal de la Pohjola S. Survey of cryptosporidiosis in feces of normal
lesiones cutáneas pasajeras al contactar con roedo­ RegiónMetropolitana de Chile. Parasitol al Día, 1992; healthy dogs. Nord Vet Med 1984; 136:189-90.
Piojos res, conejos, gatos o roedores afectados por estos 16:139-42., Soulsby EJL, Parasitologia y enfermedades parasitarias de
ácaros. En forma similar se puede mencionar a Alca[no H, Gorman T, PuelmaM.Filariasis canina en Chile. los animales domésticos. 7=. Ed.. México. Nueva Edi­
A diferencia de las pulgas, los piojos son ecto­ Notoedres cati, ácaro de la cabeza del gato y Arch Med Vet 1984; 16:67-73. torial Interamericana, 1987.
parásitos muy específicos e inclusive lo son también Otodectes cynotis, ácaro del conducto auditivo de Alcaíno H. Antecedentes sobre triquinosis en Chile. Takeuchi T, Asami S, Kubayashi S y cols. Dirofilaria
de lugares del cuerpo de los huéspedes, por lo que especies menores, ambos de baja frecuencia clínica. Monografías Med Vet 1981; 3:29-42. immitis infection in man. Report a case of infection in
su presencia en las mascotas no reviste peligro de En cuanto a garrapatas, la fauna existente en Barr S, Bowman D. Giardiasis in dogs and cats. The heart and inferior vena cava from Japan. Am J Trop
. infección para el hombre, salvo el problema estético especies domésticas en Chile es escasa con la ex­ Compendium 1994; 16:603-10. Med Hyg 1981: 30: 966-69.
de poseer un animal con piojos. En general, los pio­ cepción de Rhipicephalus sanguineus, la "garrapa­
jos son altamente susceptibles a los insecticidas y ta café del perro" de distribución mundial siendo
en estos casos sólo se trata a los animales infectados muy abundante en las áreas urbanas del país desde
ya que toda su evolución se realiza sobre el huésped, los últimos veinte años y Otobius megnini, "la ga­
no existiendo formas evolutivas en el ambiente. rrapata blanda de la oreja", propia de vacunos,
equinos y perros de las áreas rurales. También es
Acaros y garrapatas posible encontrar en medios rurales de Chile otra
garrapata dura, el Amblyomma tigrinum en perros.
Existen varias especies de ácaros que pueden La importancia para el hombre es que en ausencia
afectar a perros y gatos, causando la enfermedad de los huéspedes habituales, circunstancialmente
denominada sarna. Las sarnas más frecuentes del es posible que las garrapatas se ftjen al hombre para
perro son la sarna demodécica y la sarcóptica. La succionar sangre con las consecuentes molestias.
sarna demodécica es causada por el Demodex ca­ En este caso basta una tracción con pinzas realizan­
nis, ácaro pequeño que se encuentra en los folículos do simultáneamente un movimiento de semigiro para
pilosos y glándulas sebáceas en la piel nmmal. Bajo retirarlas. En países en que existe fiebre de las
ciertas circunstancias, especialmente asociadas a montañas Rocosas (Roclcy mo1mtain spotted fever
inmunodeficiencia de linfocitos T, presencia con­ y enfermedad del Lyme (transmitida por Ixodes
comitante de otras enfermedades, perros menores damnini), se deben tomar precauciones frente a la
de 1,5 años, etc., se manifiesta una sarna que se presencia de garrapatas con objeto de evitar la
generaliza con escaso prurito al comienzo, alopecia, infección con las ricketzias causantes de estas en­
eritema, costras y compromiso posterior de pioder­ fermedades. El tratamiento y control en el caso de
mitis secundaria. El pronóstico es muy desfavora­
ble, pudiendo en casos avanzados morir el animal.
los animales se hace recurriendo a tratamientos con
acaricidas aplicados por aspersión, inmersión, en ¡¡
.¡;,,
Es importante tener en cuenta que esta sarna no es forma spot 011 sobre el lomo del animal, inyección
contagiosa para otros perros o animales ni para el subcutánea, etcétera. [',
hombre. 1:
-1

SEXTA PARTE
Diagnóstico de laboratorio

Capítulo 64

METODOS DE DIAGNOSTICO DIRECTO


RUBENMERCADO, VICTORMUÑOZ,
MYRIAMLORCA,ALEJANDRO GARCIA

Normas de bioseguridad. En el laboratorio de ción de la piel por larvas de S. stercora/is y la


parasitología se deben guardar las normas de inhalación o ingestión de huevos de T. solium al
bioseguridad general contempladas para cualquier manipular proglótidas. Los cuidados deben extre­
laboratorio. Recordando siempre que el 80% de las marse con T. cruzi al manipular animales infecta­
infecciones "accidentales" de laboratorio, se produ­ dos, cultivos y muestras de pacientes y vectores
cen durante las actividades rutinarias (inoculaciones, (xenodiagnóstico ); similar es el caso de T. gondii
manejo de animales, centrifugando, etc.), y el 20% al manipular heces de gatos, inoculaciones experi­
por accidentes propiamente tales, como mal manejo mentales y preparación de antígenos. Por último.
de agujas de jeringas, derrames accidentales, caídas hay que tener mucho cuidado en la manipulación
de frascos, aspiración de material por pipetas. de muestras con ectoparásitos.
Entre las normas básicas, el concepto fundamen­ Los métodos directos de diagnóstico son los que
tal es el de contención, que se refiere a los métodos detectan al parásito, elementos de ellos o fracciones
seguros para el manejo de agentes infecciosos en el antigénicas en muestras de deposiciones, orina, ex­
laboratorio. Existen tres elementos de contención: pectoración, sangre u otros fluidos orgánicos. Ana­
las prácticas y técnicas de laboratorio, los equipos lizaremos los tipos de muestra y exámenes corres­
de seguridad y el diseño del laboratorio. pondientes.
Las prácticas y técnicas se refieren al conoci­
miento, toma de conciencia y manejo de muestras y
agentes. Como ejemplos, tenernos a la descontami­ DIAGNOSTICODEENTEROPARASITOS
nación de mesones y de desechos antes de la elimi­
nación; el uso de propipetas; el evitar la formación Requisitos para la toma de muestra de heces
de aerosoles; la prohibición de beber, comer, fumar
o aplicarse cosméticos; el lavado frecuente de las Muestras de heces frescas. Sirven las heces recién
manos; el uso de delantal y guantes; el transporte de emitidas y evacuadas espontáneamente. Deben re­
material contaminado en envases metálicos con tapa; cogerse en un recipiente limpio y seco. No deben
y el control de insectos y roedores. mezclarse con orina.
Los equipos de seguridad incluyen protecciones En los servicios de gastroenterología, donde
simples como el delantal y los guantes, hasta otras habitualmente se efectúan rectosigmoidoscopias,
más sofisticadas, como gabinetes de bioseguridad. pueden recolectarse muestras de contenido intesti­
En el diseño del laboratorio deben considerarse entre nal. En los lactantes se recomienda tomar la muestra
otras cosas, la facilidad de su limpieza y el uso de de heces directamente del pañal o estimular la eva­
mesones con cubierta impermeable al agua, resisten­ cuación mediante una sonda rectal. Debe transcurrir
te a ácidos, álcalis y solventes orgánicos. el menor tiempo posible entre la toma de las muestras
Específicamente, en el laboratorio de parasito­ y el examen de la misma.
logía se deben manejar adecuadamente y conocer No es recomendable el uso de laxantes salinos o
los efectos nocivos de algunos de los reactivos aceitosos para estimular el tránsito intestinal, excep­
más utilizados como el formaldehído (irritación de to en los individuos que presentan constipación, en
vías respiratorias y mucosas), el xilol (cefalea, náu­ los cuales el uso de sulfato y fosfato-carbonato de
seas y alteraéiones neurológicas), el fenol (derma­ sodio amortiguado no alteran la calidad de la muestra
titis y alteraciones de SNC) y el éter (irritación de de heces recolectada.
vías respiratorias, conjuntivas y córnea). Respec­ Debido a la eliminación irregular de los elementos
to a las prácticas en el laboratorio, se deben tomar parasitarios, el examen parasitológico de una sola
las medidas que eviten la ingestión de quistes de muestra de heces puede ser inspficiente.
protozoos como E. lzisto/ytica y G. duodena/e, y
ooquistes de l. belli y C1yptosporidium; la inha­ Muestras de heces preservadas. El deterioro de
lación de huevos de E. vermicu/aris; la penetra- una muestra de heces frescas es muy rápido, espe-
.-·

562 PARASITOLOGIA MEDICA METODOS DE DIAGNOSTICO DIRECTO 563

cialmente en regiones de clima húmedo y caluroso. servar los parámetros útiles en el diagnóstico (ejem­ - Sumergir el frotis durante tres segundos en quistes y, en especial, trofozoítos de protozoos. No
En las muestras frescas se alteran o destruyen fácil­ plo: núcleos, nucleosoma, membrana nuclear, etc.). alcohol 90%, acidificado (alcohol al 90% 99,5 mL contempla la ejecución de una preparación perma­
mente los elementos parasitarios. Para evitar la des­ y ácido acético 0,45 mL). nente que permita observar con ·detención las carac­
composición de la materia fecal y conservar los ele­ Técnica de Kato-Katz. Este método es útil para - Pasar el frotis por alcohol al 100% terísticas diagnósticas de algunos protozoos.
mentos parasitarios se utilizan diversos compuestos el recuento de huevos de helmintos, pero es poco - Realizar dos cambios en alcohol al 100% du- La muestra se debe tamizar a través de una
preservadores o fijadores, manteniéndose para es­ sensible para infecciones leves. Se recomienda espe­ rante dos a cinco minutos cada una. malla metálica o gasa quirúrgica para después
tos fines las instrucciones previamente descritas. cialmente para esquistosomosis. - Efectuar dos cambios de xilol durante dos a centrifugarla durante tres minutos a 1.500 rpm. El
Se coloca l g de deposición no fijada sobre un cinco minutos cada vez. sobrenadante se elimina y se resuspende el sedi­
Soluciones preservadoras o fijadoras de elemen­ trozo de papel de aluminio. Sobre la muestra se - Montar con cubreobjetos. mento en NaCI 0,85%, repitiendo la centrifugación
tos parasitarios en las heces. Las más frecuente­ dispone una malla metálica o plástica fina, y se hasta obtener un sobrenadante relativamente fün­
mente usadas son formoldehído o formalina al 5 ó raspa sobre el tamiz con una jeringa de tuberculina Tinción de hematoxilina férrica para muestras pio. Se colocan dos gotas del sedimento sobre un
10% en solución acuosa, el formolsal al 5% com­ sin punta. Esto se hace hasta que la deposición fijadas en SAF, PAF o PVA. Tinción que también portaobjetos y se tiñe con un colorante constituido ¡ i
puesto por una solución acuosa al 2% de llegue hasta una marca hecha previamente y que es útil para el diagnóstico de trofozoitos. Existen por 0,1 mL de lugol, 0,15 mL de fonnaldehído y
formoldehído y NaCl al 0,5%. El MiF (Merthiolate corresponde a un volumen de 35 mm3 (aprox · a­ varias modificaciones de esta tinción y describire­ 0,75 mL de tintura de merthiolate al 1: 1000, que
Iodo Formalina) que además colorea las muestras, el damente 50 g de deposición). Para esto ex·sten t mos la adaptada por Spencer y Moore (1982), que debe prepararse a diario. La otra gota se colorea con
PAF (Fenol-Alcohol-Formalina), SAF (Acetato de medidas en el comercio. La deposición se co oca es de similar número de pasos que la tinción tri­ tionina al 10%. El resto del sedimento que queda en
Na-Ac Acético-Formalina), PVA (Alcohol poliviníli­ sobre un portaobjetos y se cubre con papel c�l.o­ crómica. el tubo se resuspende en NaCl 0,85%, se agrega 2
co) y el fijador de Shaudinn. fán especial (Du Pont 124 PD), empapado en so­ El frotis se coloca en alcohol al 70% durante mL de éter etílico o sulfürico y se centiifuga nueva­
lución de verde de malaquita (malaquita al 3%, cinco minutos, posteriormente en alcohol al 70% mente. Del sedimento obtenido se tiñen dos gotas
Examen parasitológico de las heces glicerina 50 mL y agua destilada 100 mL). El con yodo durante dos a cinco minutos y alcohol al con los mismos colorantes que en la primera etapa.
portaobjeto se invierte y sobre una superficie dura 70% durante cinco minutos. Se lava en agua co­ c) Método de Telemann modificado. Esta técni­
Existe un elevado número de técnicas de exámenes se presiona suavemente para extender la muestra. rriente durante diez minutos. ca, equivalente al método de concentración con
coproparasitológicos, con fines diferentes, unos de Posteriormente se deja clarificar la preparación Colocar el frotis durante cuatro a cinco minutos Formol-Eter o a la técnica Ritchie, tiene utilidad
otros, y con ventajas y desventajas relativas. En ge­ durante una hora a temperatura ambiente. Los en la solución de trabajo de hematoxilina férrica principalmente para el diagnóstico de huevos de
neral, podemos clasificar las distintas técnicas según huevos se cuentan utilizando el objetivo lOx reco­ (mezclar en partes iguales hematoxilina al 1 % en helmintos, quistes de protozoos y excepcionalmente
la capacidad de concentrar elementos, cuantificar la rriendo toda la preparación. alcohol absoluto y solución de sulfato de amonio trofozoítos.
carga parasitaria, utilidad para diagnosticar distintos El número de huevos se calcula con la siguiente ferroso 10 g, sulfato de amonio férrico 1O g, ácido La emulsión fecal se tamiza igual que en el
estados evolutivos y la posibilidad de preparar frotis fórmula: clorhídrico concentrado l O mL y agua destilada Burrows y posteriormente se toma una gota para
permanentes a partir de las muestras. Nº huevos contados x 20x 1000 mL). Lavar con agua durante diez minutos; hacer una preparación directa, sin tinción. Luego se
La selección de una o más técnicas dependerá de Huevos/g de heces = alcohol al 70% durante cinco minutos; alcohol al vierten aproximadamente 10 mL de emulsión fecal
qué especie parasitaria y qué fase de su ciclo.evo­ Factor de consistencia 95% durante 5 minutos. Dos cambios de cinco tamizada en un tubo de centrífuga, se agrega 2 mL
lutivo es necesario diagnosticar, dadas las diferen­ minutos en alcohol al 100% y dos cambios de xilol de éter etílico o sulfürico y se agita enérgicamente,
tes cualidades de cada método. En todas las técnicas El factor de consistencia es l para deposición durante cinco minutos cada una. para, posterionnente, centrifugar por cuatro minu­
el rendimiento mejora si se exáminan varias muestras sólida; 2 para deposición semisólida; y 3 para la tos a 1.500 rpm. Se elimina el sobrenadante y se
(al menos tres) por cada paciente, obtenidas en días líquida. Técnicas con concentración de los elementos preparan dos muestras concentradas que se tiñen
alternos, dado que los elementos parasitarios se eli­ parasitarios: con el primer colorante del Burrows.
minan en forma irregular. Técnica de PVA. Es una buena técnica para el Sedimentación porf11erza de gravedad. Se reco­ d) Técnica SAF. Este método tiene buen rendi­
diagnóstico de trofozoitos y ocupa-un frotis per­ mienda para concentrar huevos de Fasciola lzepatica miento en el diagnóstico de huevos, quistes y trofo­
Técnicas sin concentración de los elementos manente. La deposición se fija en una solución de y para concentrar huevos de Schistosoma mansoni. zoítos, y consiste en una preparación concentrada al
parasitarios. Heces frescas o de contenido intesti­ alcohol polivinilico (PVA 5 g, glicerina 1,5 mL, Por centrifugación: fresco y un frotis pem1anente.
nal obtenido con sonda rectal o por rectosigmoi­ ácido acético glacial 5 mL y solución Shaudinn a) Método de Ritchie. Es un método muy difun­ Una vez filtrada la muestra se centrifuga a 2.000
doscopia, se pueden examinar al microscopio en 93,5 mL). Luego de tamizar y centrifugar la depo­ dido que detecta huevos, quistes y protozoos. Se rpm durante un minuto; el sedimento debe ser de
preparados sin tinción. Una porción de la muestra de sición de 2.000-2.500 rpm durante dos minutos, toman 1 ó 2 g de heces y se mezclan en 10 mL de 0,5 a 1,0 mL y en caso de no ser suficiente, vaciar
heces se dispone sobre un portaobjetos y se mezcla con el sedimento se confecciona un frotis que se formalina al 10%, dejándolo reposar por treinta más muestra y repetir el proceso. De este sedimento
con gotas de suero fisiológico tibio. Se cubre y se procesa por la tinción tricrómica según los si­ minutos. Se tamiza en gasa o malla metálica y se se realiza un frotis que se puede fijar en Shm1dinn
observa al microscopio. guientes pasos: vierte en un n1bo de centrífuga completándolo hasta o teñir directamente con tinción tricrómica, que se
La lectura debe ser rápida, inmediata. Los trofo­ - Colocar el frotis durante dos a cinco minutos el borde con Na Cl 0,85% y nuevamente se centrifuga detalla más adelante.
zoítos de protozoos se pueden observar vivos con en alcohol 70% con yodo (yoduro de potasio lg, a 2000 rpm por dos minutos. Se elimina el sobre­ El sedimento restante se resuspende en NaCl
los movimientos ameboideos característicos. Sin cristal yodo 1,5 g y agua destilada 100 mL). nadante y se resuspende con formalina al 10% hasta (0,85%) y se procesa en forma similar al Telemann
embargo, no es posible identificar la especie de amiba - Realizar dos cambios de alcohol al 70%: el la mitad, se agrega éter etílico (3 mL) y se bate por modificado o Ritchie.
basándose solamente en las características de los primero durante cinco minutos y el segundo durante treinta segundos. Luego se centrifugan una vez más
movimientos. La diferenciación de las especies se dos a cinco minutos. durante dos a tres minutos a 2.000 rpm y del sedi­ Métódos por flotación
realiza observando los núcleos de trofozoítos y de - Colocar en solución tricrómica durante diez mento se toma una gota con la que se realiza la
los quistes, siendo imprescindible teñir con coloran­ minutos (cromótropo 2 R 0,6 g; verde claro 0,3 g; preparación. Flotación con sulfato de zinc. Es una técnica
tes las muestras de heces que se van a estudiar. Los ácido fosfotúngsicoO, 7 g; ácido acético glacial l mL b) Técnica de Burrows (PAF). Este método es de útil para recuperar quistes y ooquistes de protozoos
colorantes como lugol, MiF o tionina permiten ob- y agua destilada 100 mL). utilidad para el diagnóstico de huevos de helmintos, y huevos de helmintos, con excepción de los oper-
564 PARAS/TOLOGIA MEDICA METODOS DE DIAGNOSTICO DIRECTO 565

culados y los de alta densidad como el de A. lumbri­ bolfucsina y se calienta basta emitir vapores. Se deja tra de jugo duodenal o biliar se puede dividir en dos plegamiento de las piezas xilol, su acción de aclara­
coides. La solución de sulfato de zinc se obtiene al reaccionar durante veinte a treinta minutos y se lava volúmenes y agregar a uno de ellos una porción miento es bastante rápida, existiendo la posibilidad
disolver S. de zinc (331 g) en 1.000 mL de agua de con agua c01Tiente. A continuación se decolora con similar de formol-sal n otro líquido preservador. Se de que la pieza se vuelva quebradiza.
la red y ajustar a una densidad de 1,18 al 1,20 alcohol-ácido durante treinta segundos a un minuto centrifuga y se examina al microscopio el sedimento Para teñir gusanos o trozos de los mismos se
(preferir esta última en caso de material fijado). La y se lava posterionnente con agua. La contraco­ de los concentrados. tratan con una solución de formaldehido al 5% 0
muestra de deposición (1/2 cucharadita) se disuelve loración se efectúa con azul de metileno durante un con una solución alcohol-formol-ácido acético se
con agua en un tubo de centrífuga y se centrifuga a minuto, se lava y se deja secar al ambiente. Obtención de la muestra mediante la cápsula dejan por nna hora en alcohol al 50% y luego a�ua
2.500 rpm durante un minuto. Se descarta el Los ooquistes se ven de color rojo con fondo de Beal. La cápsula está rellena de un contenido destilada. Posteriormente se pueden colorear con
sobrenadante y el sedimento se resnspende en la azul. gelatinoso y presenta en un extremo una cuerda fina alumbre-cmmin, generalmente el tiempo empleado
solución de sulfato de zinc (se puede filtrar en gasa), de nylon. El paciente se traga la cápsula y se espera para la tinción es de 24 a 36 horas; con hematoxi­
para luego centrifugar durante un minuto a 2.500 Método de observación por fluorescencia. Para que alcance el duodeno. Luego se retira cuidadosa­ lina de Delafield, basta una hora o algo más para
rpm. detectar C1Jiplosporidium parvum se han usado las mente. El material mucoso adherido a la cápsula se teñir; o cannin acético de Semichon, se necesitan
Sin remover el tubo de la centrífuga o colocán­ tinciones fluorescentes de aureamina y aureamina­ deposita sobre un portaobjetos. Se cubre y se obser­ 24 horas como mínimo para lograr una buena tin­
dolo cuidadosamente en una gradilla, se recoge de rodamína. Son coloraciones acidorresistentes como va al microscopio. ción. Después de colorear los ejemplares tratados,
la capa superficial una a dos gotas con un asa de la tinción de Ziehl-Neelsen, pero el material debe se pasan .por una batería de alcoholes de diferentes
platino. Se coloca la gota en un portaobjetos y se ser observado en un microscopio dotado de luz Método de Baermann para el diagnóstico de concentraciones y, finalmente, se hace el montaje
tiñe con una gota de lugol, la que se cubre y observa. ultravioleta. Cyc/ospora cayetanensis no requiere estrongiloidosis. Esta técnica aprovecha la capaci­ en portaobjetos con bálsamo del Canadá.
ser teñida con estos colorantes ya que se ha descrito dad de migrar de las larvas de S. stercoralis. Se
Flotación en azúcar (técnica de Sheather). Es que los ooquistes son autofluorescentes. colocan unos 10 g de deposición sobre un trozo de
una técnica de recuperación de ooquistes de C1yp­ gasa que se ha puesto sobre una malla metálica. En DIAGNOSTICO DE HEMOPARASITOS
tosporidiu111. Luego de filtrar la muestra de deposi­ Otros exámenes directos para diagnóstico un embudo colocado en un soporte apropiado al que
ción fijada (PAF, Formol-Sal), se coloca 1 a 2 mL de enteroparásitos se ha agregado un trozo de tubería de goma con una El estudio microscópico de las sangres es básico
en un tubo cónico, se completa con solución de llave infe1ior, se echa agua potable a 37ºC hasta el para el diagnóstico etiológico de la malaria. Tam­
Sheather (suerosa 500 g agua destilada 320 mL y Método de Graham borde. La malla metálica que soporta líÍgasa'y la bién es útil para la detección de T1Jipanosoma cruzi
fenol 6,5 g) hasta el borde y se centrifuga a 3.000 muestra se dispone sobre el embudo pennitiendo el en individuos que presentan infección aguda o con­
rpm durante cinco a diez minutos. Es el examen de elección para detectar huevos de contacto entre la parte inferior de la desposición y génita y para detectar microfilarias.
Luego se coloca un cubreobjetos en la superficie Enterobius vermicularis. El examen de Graham es ., el agua. Después de una a dos horas se abre la llave La búsqueda de los parásitos presentes en la
de la solución, disponiéndose sobre un portaobjetos sencillo y de muy bajo costo. La sensibilidad del inferior y se recolectan unos 1O mL de agua, que se sangre habitualmente es tediosa. La observación de
y se lee al microscopio de contraste de fase. examen para esta infección es de un 90% aproxima­ centrifuga a 2.000 rpm durante un minuto y se los parásitos establece el diagnóstico de certeza. La
damente. En cambio, el rendimiento del examen observa el sedimento. presencia de estos parásitos no es constante, sino
Técnicas para pesquisar coccidios intestinales parasitológico seriado de deposiciones no sobrepasa cíclica, con períodos alternados de parasitemias altas
el 5%. Ocasionalmente, se pueden observar huevos Observación macroscópica de helmintos y bajas.
Tinciones alcohol ácidas para el diagnóstico. de Taenia sp., deAscaris lumbricoides o de Tríchuris Con el objetivo de mejorar el rendimiento de la
Permiten observar ooquistes de C,yptosporidium tríclziura. Helmintos recolectados en agua. Se recomien­ detección de parásitos sanguíneos se han descrito
pa1111111z, Isospora belli o Cyc/ospora cayetanensis, Se usa una cinta adhesiva transparente (scotch) da proceder a relajar y extender los ejemplares por diversas técnicas de concentración, especialmente
ya que son organismos con propiedad de coloración de 1 ó 2 cm de ancho. La muestra debe recolectarse examinar. Los gusanos muy pequeños se pueden mediante centrifugación. También la recolección
acidorresistente. en la mañana, antes de la higiene personal. Para hidratar con una gota de suero fisiológico isotónico de muestras seriadas contribuye a aumentar el ren­
De las muestras de deposiciones fijadas, des­ recolectar las muestras se entrega al paciente un set sobre un portaobjetos, luego se cubre, poniendo dimiento de los exámenes. Aún así, no se ha podido
pués de la primera centrifugación del Burrows o del de cinco portaobjetos. Se debe despegar la cinta del encima un cubreobjeto, si es necesario se puede establecer adecuadamente los parámetros de rendi­
sedimento del Telemann o Ritchie, se realiza un portaobjetos y aplicar la cara adhesiva de la cinta presionar suavemente y observar bajo lupa o a sim­ miento de los diversos exámenes, por lo que se debe
frotis que se seca al ambiente. A continuación se varias veces en la región perianal. Luego, se vuelve ple vista. Las proglótidas se pueden colocar entre tener siempre en consideración que los informes
tiñe el método de Kinyoun o con la tinción de Ziehl­ a adherir al portaobjetos. Se repite el procedimiento dos portaobjetos, los que se sujetan con una tira negativos de laboratorio no descartan la existencia
Neelsen modificada. durante cinco días seguidos. Se observa la presencia elástica con el fin de aplanar la pieza y se observan de una infección.
En el Kinyoun el frotis se fija con metano[ du­ de huevos o ejemplares adultos de E. vermicu/arís al trasluz.
rante treinta segundos y se tiñe con frío durante mediante examen microscópico de bajo aumento. Requisitos para la toma de muestra de sangre
cinco minutos con una solución compuesta por Helmintos fijados y tratados con soluciones
fucsina básica 4 g, fenol 8 g, etanol al 95% 20 mL Técnícas de examen de líquido duodenal aclaradoras. Tanto los helmintos peqneños como En los recién nacidos es conveniente tomar mues­
y agua destilada 100 mL. Se lava con etanol al 50% en las proglótidas de tenias se pueden tratar con tras pequeñas de sangre, mediante punción capilar
por tres a cinco segundos y luego con agua corrien­ Examen directo de líquido duodenal. El jugo solnciones aclaradoras para destacar estructuras que del talón del pie o del lóbulo de la oreja. En niños de
te. Se decolora con ácido sulfúrico al 1% durante duodenal obtenido por sondeo duodenal se puede permitan el diagnóstico diferencial. Las soluciones mayor edad y adultos se puede puncionar un dedo de
dos minutos y se contracolora con azul de metileno mirar al fresco con el fin de observar trofozoítos de frecuentemente usadas son: carbol-xilol (1 :3 ), la mano, preferentemente en el pulpejo lateral. Con
Liieffler ( disolver azul de metileno 0,3 g en 30 mL G. duodenalis, ooquistes de L belli y C,yptospo­ lactofenol (1:1), creosota, solución que permite que la punción capilar se recolecta entre 0,2 y 0,4 mL de
de alcohol al 95% y agregar 100 mL de hidróxido ridíwn (se tiñe con técnica alcohol-ácida), huevos los parásitos conserven su flexibilidad y blandura; sangre.
de potasio 0,01%). Luego se lava con agua corriente de F. hepatica y larvas de S. stercoralis. pero es más lento el proceso de aclaramiento. Se ,: La recolección de sangre venosa permite contar
y se deja secar. puede utilizar glicerina como alternativa para acla­ con volúmenes mayores habitualmente sobre 1 O mL.
En el Ziehl-Neelsen se cubre el frotis con car- Examen microscópico concentrado. La mues- rar nemutodos, pero puede producir arrugamiento o Cuando lo requiera el método parasitológico se debe
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566 PARASITOLOGIA MEDICA METODOS DE DIAGNOSTICO DIRECTO 567

disponer la sangre en un tubo de ensayo que conten­ globiniza la muestra agregando al portaobjetos gotas se hallan alimentado (abdomen globoso). Una vez La secreción bronquial obtenida por lavado
ga anticoagulante, generalmente se utiliza, para tal de Giemsa, diluyendo una gota por 2 mL de agua tomada la muestra, las cajitas se mantienen en cáma­ broncoalveolar mediante broncoscopia es la muestra
efecto, citrato de sodio al 10% (O,1 mL por cada mL destilada, durante 5 minutos. Se elimina la solución ra húmeda temperada a 27-28º C y se examinan pe­ ideal para el diagnóstico de P. cari11ii. La muestra
de sangre). y se repite esta etapa por 3 veces. La tinción se riódicamente hasta completar 150 días. procesada por las tinciones descritas dan un rendi­
En otras ocasiones, se puede requerir sangre sin efectúa mediante gotas de solución de Giemsa con­ miento superior al 85%.
anticoagulante. Estas muestras se deben dejar coa­ centrado (1 gota x 1 mL de agua destilada) por 30
gular a temperatura ambiente. minutos. Se lava con agua destilada y se deja secar DIAGNOSTICODEOTRASPARASITOSIS Biopsias e inoculación experimental. En algu­
a temperatura ambiente en posición inclinada. Se nos casos el examen histológico puede aclarar pro­
Examen de sangre sin concentración observa al microscopio con aumento 40x y I00x, Examen directo al fresco de secreción vaginal. blemas de diagnóstico parasitológico. En la piel se
de elementos parasitarios recorriendo la mayor cantidad de campos microscó­ Se utiliza en e·! diagnóstico de tricomonosís. Una puede diagnosticar O. volvulus y M. streptocerca, al
picos. gota de secreción se examina entre lámina y laminilla igual que E. histolytica y Leisl1111a11ia en los casos
Observación de sangre al fresco entre porta­ sin tinción o con colorante Rojo Neutro al 0,1% (en de amibiasis y leishmaniosis cutánea, respectiva­
objetos y cubreobjetos. Este procedimiento permi­ Método de Strout. Es una técnica simple y de NaCI 0,85%), el que no tiñe al protozoo vivo, pero sí mente.
te pesquisar tripomastigotos y microfilari¡¡s. La buena sensibilidad en los casos agudos de enferme­ a otras células epiteliales y leucocitos.
detección se efectúa observando los parásitos móvi­ dad de Chagas. Se extraen 5 mL de sangre sin Por dificultades en el transporte de las muestras, Examen de frotis de material dérmico ulceroso
les desplazándose entre los elementos sanguíneos. anticoagulante, se deja coagular y se retira el coá­ además de solución NaCI 0,85% se han empleado para detectar Leis/z111a11ia sp. De los contornos de
En un portaobjetos se dispone una gota de san­ gulo espontáneamente. Se recoge el sobrenadante y solución glucosada al 5%, solución Ringer, SAF, la lesión ulcerosa con aguja y jeringa hipodérmica se
gre y se cubre, tratando de obtener una capa delga­ se centrifuga a 10.000 rprn durante tres minutos, buffer potásico pH 7,4, que mejoran el rendimiento toma una muestra. El material recolectado se depo­
da. Se debe examinar todo el preparado al micros­ para separar los glóbulos rojos. Se decanta el so­ del examen. La tinción de Papanicolau presenta una sita sobre un portaobjetos y se deja secar a tempe­
copio con aumento l 0x y 40x. La sangre se puede brenadante (suero) que se guarda para diagnóstico alta especificidad, pero un bajo rendimiento. ratura ambiente. Se fija con metano! y se tiñe con
obtener por punción venosa o capilar. Se debe exa­ serológico. El sedimento se observa entre cubre y Además de la toma de la muestra, el transporte y Giemsa, examinándose al microscopio buscando
minar la mayor cantidad posible de preparados portaobjetos. Es aconsejable revisar cuidadosamen­ el uso de tinción, este examen depende en gran amastigotos de Leishmania sp. intracelulares o li­
microscópicos y para aumentar la posibilidad diag­ te varias preparaciones en busca de formas móviles medida de la acuciocidad del observador. bres.
nóstica de filariosis, se recomienda recolectar las del parásito. El examen de tejido ganglionar en biopsias y
muestras en el noche. Examen directo a fresco de orina.Para el diagnós­ frotis permite detectar T. gondii, T. cruzi y Leislz­
Microhematócrito o microstrout. Se recoge la tico de tricomonosis en el hombre se realiza examen mania teñidos con métodos convencionales o anti­
Frotis sanguíneo. La realización de un extendi­ sangre en capilares de microhematócrito heparini­ microscópico de orina recién emitida, con o sin tinción. cuerpos monoclonales marcados con enzimas o sus­
do de sangre en un portaobjeto y su posterior tinción zados. El extremo inferior se tapa con masilla y se El rendimiento puede mejorar al dejar sedimentar la tancias fluorescentes. Ocasionalmente se confirma
permite observar los detalles morfológicos de Plas­ centrifuga a 1.000 rpm durante tres minutos. Se muestra a 37ºC o centrifugándola a baja velocidad (500 la triquinosis con biopsia de músculo o examen post
modium sp., T. c111zi o microfilarias. Se debe reali­ fractura el capilar en el límite de la capa leucocitaria. a 1.000 rpm). Se recomienda observar un mínimo de mortem.
zar un frotis con una gota delgada de sangre venosa Se deposita sobre un portaobjetos la capa de leuco­ tres preparaciones por muestra. Se cortan trozos muy finos de tejido muscular y
o capilar utilizando un cubreobjeto de 20 por 20 citos y plasma. Al examinar, es necesario recorrer El examen del sedimento de orina también es útil se prensan entre dos portaobjetos, sujetando los
mm, este preparado se deja secar a temperatura íntegramente la preparación efectuando un mínimo para la búsqueda de microfilarias o de huevos de S. extremos con cinta adhesiva o elástica. Se observa
ambiente. Se tiñe con colorante de May-Grünwald de tres microhematócritos por paciente. haematobium luego de filtrar la orina por una mem­ al microscopio con aumento !Ox.
Giemsa o de Wright y se observa al microscopio con brana.
aumento 40x y I00x. Se debe examinar la mayor Xenodiagnóstico Digestión artificial. Trozos de biopsias muscu­
cantidad de campos microscópicos en los prepara­ Examen de expectoración y secreción bronquial. lares pueden digerirse artificialmente en el caso de
dos. También, se puede teñir con Giemsa diluido al Este método se usa para el diagnóstico de la En la expectoración se pueden observar larvas de resultar negativo el examen microscópico. En una
10% en una solución tampón fosfato pH 7,0 por 45 enfermedad de Chagas aguda, incluyendo los casos . A. Iumbricoides, S. stercoralis y huevos de gasa especialmente dispuesta sobre un embudo de
minutos. El frods previamente se debe fijar con congénitos. La sensibilidad del xenodiagnóstico es Paragonimus spp. En hidatidosis, macroscópica­ vidrio al que se le ha conectado un tubo de centrí­
metanol durante 30 segundos. Se recomienda efec­ menor en la etapa crónica de la infección chagásica. mente se pueden detectar membranas de un quiste fuga, se colocan trozos pequeños de músculo. Se
tuar a lo menos 3 muestras por paciente. Para proceder a la toma del examen, primero se roto y escólices o ganchitos de la larva de E. adiciona solución gástrica artificial hasta sumergir el
debe revisar que las cajitas cilíndricas de madera grantlÍOSllS. contenido de la gasa. Se incuba a 37ºC por 24 horas.
Técnicas de concentración contengan las ninfas de tercer estadio de Triatoma Dentro de los protozoos, en pacientes con inmu­ Se elimína cuidadosamente el sobrenadante y se
infestans en ayuno. Para ello, se retira cuidadosa­ nodeficiencia, el examen de expectoración espontá­ retira el tubo de centrífuga. Se toman gotas del se­
Gota gruesa. Es una técnica de mejor rendi­ mente la malla que cubre la cajita y se debe observar nea y especialmente inducida, es de utilidad para dimento y se colocan sobre un portaobjetos y se
miento que el frotis sanguíneo, ya que se examina que las ninfas presenten sus abdomen plano. Se diagnosticar P. carinii. La muestra debe teñirse con cubre. Se observa al microscopio con aumento l 0x,
una mayor cantidad de sangre (varias gotas). En el utilizan dos o más cajitas que traen en su interior 7 metanamina de plata o azul de toluidina; como téc­ buscando larvas libres de Trichinella spiralis.
caso de los plasmodios de la malaria, estos se obser­ ninfas. Mediante un brazalete se coloca cada cajita nicas de elección. La inmunofluorescencia con Biopsias de mucosa rectal y vesical permiten
van libres, debido a que una etapa de la técnica en contacto con la cara externa del brazo del pacien­ anticuerpos monoclonales y el PCR son de una alta diagnosticar la S. mansoni y japonicum, respectiva­
contempla la ruptura de los glóbulos rojos. Median­ te o el abdomen del recién nacido. Se deja 30 mínu­ sensibilidad y especificidad. El rendimiento de estas mente.
te un alfiler o con el extremo de otro portaobjetos o tos, y luego se coloca la otra cajita (pueden colocar­ técnicas es mayor al 60%, especialmente en pacien­ Las biopsias intestinales permiten el diagnósti­
aguja hipodérmica se realizan movimientos circula­ se ambas simultáneamente). Al retirar la cajita se tes con SIDA. En estos pacientes también se ha co de giardiasis, criptosporidiosis, isosporosis y
res sobre las gotas de sangre depositadas en el centro debe practicar aseo en la zona de la postura con encontrado Cryptosporidium en expectoración al amibiasis en los casos en que los métodos habitua­
de un portaobjeto hasta formar pequeños coágulos. algodón con alcohol. Se debe volver a revisar el ser teñida con Ziehl-Neelsen y Toxop/asma gondii les no los hayan detectado.
Se deja secar a temperatura ambiente. Se deshemo- interior de las cajitas para constatar que las ninfas mediante anticuerpos monoclonales y PCR. Las distintas especies de Microsporidium se
568 PARAS/TOLOGIA MED!CA METODOS DE D!AGNOST!CO D!RECTO 569

diagnostican con microscopio electrónico en mues­ etc. El diagnóstico se realiza principalmente por la Para la amplificación de un segmento específico Ferreira Da Cruz M De F, Machado-Passo R, Fortier B y
tras de córnea, intestino, hígado, cerebro e intestino. morfología característica. del ADN, son utilizados dos oligonucleótidos inicia­ cols. Development of an immunoenzymatic assay using
dores, los cuales, según la secuencia de comple­ a monoclonal antibody against a 50- kDa catabolite
Aislamiento de amibas de vida libre (AVL) de Observación y conservación de artrópodos de mentaridad de las bases, dan el punto de partida a un from the P l 26 Plasmodiumfalciparum protein to the
muestras de líquido cefalorraquídeo (LCR) y raspa­ interés médico. Es útil revisar insectos o arácnidos determinado gen. Estos dos iniciadores, hibridizan diagnosis of malaria infection. Mem lnst Oswaldo
do de córnea. Incubar la placa de agar no nutriente bajo lupa de mano o estereoscópica con aumentos en oposición a cadahebradel ADN templado, exten­ Cruz 1992; 87 (Suppl 3): 187-92.
a 37 ºC por 30 minutos. Agregar dos a tres gotas de lOx ó 14x. La mayoría de los artrópodos se puede diendo la secuencia nucleotídica entre ellas. Cada Freillij H, Corral R, Katzin A, Grinstein S. Antigenuria in
la suspensión de Escherichia coli o E11terobacter mantener por largo tiempo en solución de alcohol ciclo produce hebras de ADN complementario, infants with acute and congenital Chagas' disease. J
aerogenes en el centro de la placa y dispersarlo con etilico de 70 grados. Para observar los detalles es­ mediado por los efectos de la unión de la polimerasa Clin Microbio! 1987; 25: 133-7.
una torunda estéril o con un asa. Inocular la muestra tructurales se pueden colocar sobre un portaobjetos, a cada iniciador. Freilij H, Muller L. Gonzalez S. Direct micromethod for
en el centro de la placa. adicionar una gota e permount, solución de Hoyer u Los productos de cada ciclo son duplicados (2n, diagnosis of acule and congenital Chagas' disease. J
El líquido cefalorraquídeo (LCR) se centrifuga. otro medio de montaje, cubrir con cubreobjetos y donde n es el número de ciclos de amplificación), Clin Microbio! l 983; 18: 327-30,
Con pipeta estéril, cuidadosamente se transfieren 0,5 secar en estufa o a temperatrua ambiente y observar generando un incremento exponencial en el núme­ García L, Brukner D, BrewerT, Schimizu R.Techniques
mL del sobrenadante a un tubo estéril y se guarda a al microscopio. ro de copias sintetizadas. Esto resulta de una alta for the recovery and identification of Cryptospori­
4ºC para su posible uso posterior, el resto de sedi­ sensibilidad del método, produciendo múltiples dium oocysts from stool specimen. J Clin Microbio!
mento se transfiere a dos placas de agar sembradas copias a partir de un número muy reducido de se­ 1983; 18: 185-90,
con bacterias. Se incuba una placa a 37º C y otra a DETECCIONDEANTIGENOS cuencias de ADN iniciales. Halcangard C, Deelder Am, Gabone Rm, Nilsonn LA y
43ºC. PARASITARIOS Ambos ADN, genómico o cADN (transcripción cols. A comparative study on specific antibodies and
Se debe examinar cada 24 horas bajo estereos­ reversa a partir de ARN) pueden ser utilizados como circulating antigen (CAA) in senun and parasitological
copio o microscopio para observar el desarrollo de Con el desarrollo de anticuerpos monoclonales blancos para esta reacción. Debido a esta caracterís­ findings for diagnosis of Sclzistosomiasis mansoni in
A VL, hasta completar 7 días, si no hay presencia de antifracciones antigénicas parasitarias se han imple­ tica del procedimiento es posible detectar el ADN an endemic area in Tanzania. Acta Trop 1996; 61:
AVL se informa un resultado negativo. mentado técnicas, en especial ELISA, que permiten correspondiente a un parásito en 1O mL de sangre 213-22.
La muestra de raspado cornea! debe tomarla el la detección de estos antígenos al estar presentes en (T. cmzi) o en volúmenes menores de lavado bron­ Lim PK. Recent advances in diagnostic techniques in
oftalmólogo. La muestra obtenida se mezcla con las muestras estudiadas. coalveolar (P. carinii). La identificación de porcio­ filariasis. Southeast Asian JTrop Med Public Health
pequeñas alicuotas de solución de Page's y se de­ Los antigenos se pueden determinar en deposi­ nes conservadas de ADN parasitario está permi­ 1993; 24 (Suppl 2): 45-50,
positan en dos placas de agar, siguiendo el mismo ciones (para amibiasis, gíardiasis y criptosporidio­ tíendo la utilización de PCR no tan sólo con fines Mengistu G, Akuffo H, Febniger TE, Negese Y, Nilsen
procedimiento descrito para el LCR. sis); en sangre (para T. cruzi, T. gondii, Plasmodium diagnósticos, sino que para estudios epidemiológi­ R. Comparison of pamsitological nnd immunological
Se debe complementar el examen microscópico spp.), en líquido cefalorraquídeo (para la neurocisti­ cos y de evolución genética de parásitos. methods in the diagnosis of leishmaniasis in Ethiopia.
con el de los cultivos de las muestras. El diagnóstico cercosis y toxoplasmosis cerebral) y en orina (para Trans R SocTrop Med Hyg 1992; 86: 154-7.
no es simple y no debe basarse solamente en las T. cruzi, T. gondii y Schistosoma). Michiels Jf, Hofman P, Saint Paul MC, Loubiere R y cols.
características morfológicas, sino en varios paráme­ Todas estas técnicas se encuentran en proceso BIBLIOGRAFIA Pathological features of instestinal microsporidiosis
tros como: comportamiento de la cepa aislada a di­ de perfeccionamiento y son de costo elevado, algu­ in HIV positive patients. A report of 13 new cases.
ferentes temperaturas (42º-43º C), aparición de nas de ellas ya son comercializadas. En el futuro Arias B, Subiabre V, Salas O, Ojeda B y Ogueta A. Pathol Res Pract 1993; 189: 377-83.
flagelos, reacciones inmunobiológícas e inoculación serán de gran utilidad, en especial, en infecciones Estudio comparativo de cuatro métodos clásicos de National Committee For Clinical Labomtory Standards.
experimental. cuyo diagnóstico es complejo. diagnóstico de la infección por Triclzomonas vagina­ Protection of laboratory worlcers from infüctious
La inoculación experimental de animales de la­ La tecnología de biología molecular inicialmente /is en la mujer en relación al método de Papanicolau. disease transmitted by blood and tissue. NCCLS 1987;
boratorio se realiza intranasal en la leishmaniosis e favoreció la detección de ADN parasitario mediante Bol Chil Parasitol 1972; 27: 87-90, 7 (9).
intraperitoneal en la sospecha diagnóstica de toxo­ el método de hibridización del ADN, para ello se Bosman A, Modiano D, Voglino Me, Pizzi L, Bartoloni P Ortega YR, Sterling CR, Gilman RH, Cama VA, Diaz F.
plasmosis y enfermedad de Chagas. La mejoría de las empleó sondas inmunorradiométricas o inrnunoen­ y cols. Malaria transmission in a central area of Futa Cyc/aspora cayeta11e11sis: a new protozoan paU1ogen
técnicas serológícas han desplazado estos procedi­ zimáticas específicas y homólogas de mRNA o ADN Djalon {Guinea): results of a parasitological survey of humans. N Engl J Med 1992; 328: 1308-12.
miento que, además de engorrosos, encierran peligro genómico de T. cruzi, T. gondii, etc., con los cuales during the 1989 rainy season. Pamssitologia 1992; Rabello AL. Parasitological diagnosis of Sc/zistosamiasis
para el personal de laboratorio. se "hibridiza" el material genético presente en la 34: 135-42. 111a11soni: fecal examination and rectal biopsy. Mem
muestra en estudio. Clavel A, Ama! AC, Sánchez EC, Varea M, Castillo FJ y Inst Oswaldo Cruz 1992; 4: 325-3 l .
Debido a la escasa cantidad de ADN o mRNA cols. Evaluation of the optima! number of faecal RooU1 I , Bjorkman A . Fever episodes in a holocndemic
TECNICASDEDIAGNOSTICO presente en la muestra, el rendimiento del método specimens in the diagnosis of c,yptosporidiosis in malaria area ofTanzania: pamsitological and clinical
DEARTROPODOSDElNTERESl\llEDICO resultó ser bajo a pesar de su alta especificidad. AIDS and immunocompetent patients. Eur J Clin findings and diagnostic aspects related to malaria.
La implementación de PCR (Polimerase Chain Microbiol lnfect Dis 1995; 14: 46-9. Trans R SocTrop Med Hyg 1992; 86: 479-82.
La identificación precisa de un artrópodo es Reaction) aumentó la sensibilidad de los métodos Cook GC. Entamoeba lzistolytica and Giardia lamblia Sobottka Y, Albrecht H, Schaffer H, Schottelius J y cols.
compleja y requiere la experta participación de un para detectar ADN parasitario amplificando la canti­ infections: curren! diagnostic strategies. Parsite. 1995; Disseminated encepbalitozoon {Septata) intestinalis
entomólogo. Al laboratorio de parasitología con cier­ dad del mismo, presente en la muestra en estudio 2: 107-12. infection in a patient with AJDS: novel diagnostic
ta regularidad se envían algunos artrópodos de in­ mediante la polimerización en cadena. La reacción en Dalimi A, Khoshzaban F. Comparative study of two approacbes and autopsy-confinned pamsitological
terés médico que requieren ser identificados, al me­ cadena de la polimerasa (PCR) amplifica in vitro methods for the diagnosis of Enterobius vermicu!aris cure following treatment with albendazole. J Clin
nos en su género. Por ejemplo es común revisar secuencias de ácidos nucleicos, en forma selectiva. in the appendice. J Helminthol 1993; 67: 85-6. Microbio! 1995; 33: 2948-52.
larvas de moscas, liendres y adultos de Pedic11!Z1S Consiste en la aplicación de ciclos repetitivos de Dimier-David L, David C, Ravisse P, Bustillo R, Revollo Socyoko SS. The use of monoclonal antibodies in the
humamts, garrapatas o garrapatillas, ácaros de la desnaturación del ADN, primeramente templados y S y cols. Parasitological diagnosis of mucocutaneous detection of circulating antigens in Malayan filaria­
sama o de vida libre, triatominos, mosquitos, arañas, extendidos por la enzima ADN polimerasa. leishmaniasis due to Leishmania brazilensis in Boli­ sis. Southeast Asían JTrop Med Public Heath 1993; 2:
via. Rev Soc Bras MedTrop 1991; 24: 231-4. 23-5.
570 PARASITOLOGJA MEDICA Capítulo 65
True P, Bailey JW, Doua F, Laveissiere C, Godfrey DG. A
comparison ofparasitological methods far the diagno­
WinckerP, Bosseno MF, BrittoC, Yaksic N,Cardoso MA
y cols. High correlation between Chagas'disease METODOS DE DIAGNOSTICO INDIRECTO
sis of gambian trypanosominsis in an area of low serology and PCR-based detection of T1:¡,pa11oso111a
endemicity in Cote d' Ivoire. Trans R Soc Trap Med cnd kinetoplast ADN in Bolivian children living in MYRIAM LORCA y MARlA DEL CARMEN CONTRERAS
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Wahlquist SP, Eberhard MI. Sodium azide: ineffective as diagnosis (see comments). Trnns R Soc Trap Med
a faecal preservative for parasitological diagnosis. Ann Hyg 1992; 86: 505-7. El desarrollo de los métodos indirectos ha sido Reacciones de precipitación
Trap Med Parasitol 199!; 85: 365-8. de fundamental importancia para el diagnóstico de
aquellas parasitosis en las cuales su detección por En ellas los anticuerpos específicos divalentes
métodos directos es poco factible debido a su loca­ contenidos en el suero en estudio, se unen a los
lización tisular y, por lo tanto, es dificil la visuali­ antígenos polivalentes previamente preparados,
zación del parásito o alguno de sus elementos. Ade­ constituyendo complejos antígeno-anticuerpo (Ag­
más, esta tecnología permite la evaluación de la Ac), al comienzo solubles, los cuales posteriormen­
respuesta inmune del hospedero contra el parásito te se aglomeran formando redes. Si la relación an­
y su evolución frente al tratamiento médico o qui­ tígeno-anticuerpo es óptima, estos agregados preci­
rúrgico. Por otra parte, estos métodos tienen gran pitarán, debido al alto peso molecular de sus com­
utilidad en los estudios epidemiológicos de las in­ ponentes, la neutralización de las cargas eléctricas
fecciones parasitarias tanto del hombre como de los y otros factores fisicoquímicos tales como pH, tem­
animales. peratura y fuerza iónica del medio. Si no existen
Los métodos indirectos hacen evidente la res­ anticuerpos en el suero, el antígeno permanecerá en
puesta inmune especialmente humoral del hospede­ suspensión.
ro, frente a la presencia de antígenos parasitarios Las reacciones de precipitación más usadas en
extraños a su organismo. La mayor parte de ellos parasitología son las siguientes:
permite la detección de anticuerpos, pero es posible
pesquisar también células sensibilizadas, comple­ Reacción de precipitinas o test del anillo. Uti­
jos antígeno-anticuerpo (complejos inmunes) y liza antígenos solubles que reaccionan con los res­
moléculas efectoras de la respuesta inmune, como pectivos anticuerpos específicos contenidos en el
fracciones del complemento y citocinas. suero en estudio. A una relación óptima antígeno­
Debido a que un gran número de estas pruebas anticuerpo, se forma un precipitado en la interfase
se pueden practicar en el suero del paciente, se les líquida.
ha nominado como reacciones serológicas, siendo Ha sido empleada en el diagnóstico de la triqui­
factible utilizarlas en otros tejidos y fluidos orgáni­ nosis debido a su buena sensibilidad durante la eta­
cos. pa aguda de la infección. Sin embargo, utiliza como
Todas las reacciones inmunológicas dependen antígeno un extracto crudo del parásito, y produce
en gran medida de dos factores. Por una parte, la reacciones inespecíficas, razón por la cual ha sido
capacidad de estos métodos de detectar las más sustituida por otras pruebas.
mínimas cantidades de antígenos o anticuerpos (sen­
sibilidad), dependiente de la reacción inmunoquí­ Doble difusión. En esta reacción los antígenos
mica utilizada y, por otra, la capacidad de detectar y los anticuerpos en estudio difunden en forma
específicamente los anticuerpos y/o antígenos indu­ encontrada a través de geles, con velocidades de
cidos por la infección parasitaria (especificidad) difusión que están en relación con el tamaño y la
que, en gran medida, depende de la calidad de los concentración de sus moléculas. Al encontrarse en
antígenos utilizados. las proporciones adecuadas, reaccionarán visualizán­
Describiremos a continuación los fundamentos dose bandas o líneas de precipitación. La reacción
inmunoquímic·os de las reacciones serológicas más más difundida es la Doble Difusión para el diagnós­
frecuentemente utilizadas en nuestro medio para el tico de la hidatidosis, con detección del arco 5 (DD5),
diagnóstico de las parasitosis. pero sus pobres resultados én cuanto a sensibilidad
y especificidad la han desplazado. ,
FUNDAMENTOS
Inmunoelectroforesis. Las proteínas constitu­
Los métodos serológicos pueden clasificarse, de­ yentes del antígeno, son separadas en un gel de agar
pendiendo de su fundamento inmunoquímico, en: como soporte, a través de un campo eléctrico según
572 PAR,IS/TOLOGIA MEDICA METODOS DE DIAGNOSTICO INDIRECTO 573

sus cargas netas. Posteriom1ente, se difunden en Aglutinación pasiva. Emplea partículas inertes dad y especificidad, ha sido discontinuada en su clases (lgG, IgM, lgA, lgEJ adheridos a antígenos
fonna encontrada al antígeno, el suero que contiene como soporte de los antígenos solubles (bentonita, empleo debido a la complejidad de sus realización de superficie.
los anticuerpos específicos. En las zonas de unión látex polivinílico, colesterol, glóbulos rojos), todas y a la necesidad de trabajar con parásitos vivos
de cada fracción antigénica con sus respectivos ellas aglutinan al reaccionar con los anticuerpos altamente virulentos, lo cual constituye un riesgo Métodos inmunoenzimáticos. La marcación de
anticuerpos específicos, se detectarán bandas de específicos. para sus manipuladores. proteínas (antígeno o anticue1po) con enzimas, tie­
precipitación. La técnica de inmunoelectroforesis ne la ventaja de aumentar la sensibilidad de los
es aplicada en el diagnóstico de hidatidosis, cisti­ Reacción de floculación con látex. Fue utiliza­ Reacción de fijación del complemento. Esta métodos que emplean este tipo de conjugados, pues
cercosis y fasciolosis. da durante mucho tiempo corno prueba de tamiz por antigua reacción ha sido ampliamente utilizada en la reacción enzima-sustrato amplifica la visualiza­
su buena sensibilidad, rapidez y facilidad de ejecu­ el diagnóstico qe las parasitosis. Consta de dos sis­ ción de la reacción inmunológica a través del pro­
Electrosinéresis. En el soporte empleado (gel) ción, especialmente en el diagnóstico de enfem1e­ temas, uno de detección de los anticuerpos presen­ ducto final crornogénico. De acuerdo al tipo de pro­
se disponen en fonna encontrada la mezcla antigé­ dad de Chagas, toxoplasrnosis e hidatidosis. Pero tes en el suero del paciente (antígeno-complemento ducto obtenido, los métodos se pueden clasificar en
nica y el suero en estudio, en el cual se espera sus problemas de especificidad derivados de la mala de cuy) y otro indicador de la reacción antígeno­ reacción de ELISA cuando el producto es soluble y
detectar los anticue1pos específicos. Se aplica co­ estandarización en el tamaño y la concentración de anticuerpo (hernolisina-glóbulos rojos de cordero). visible a simple vista o mediante lectura espectrofo­
rriente eléctrica para acelerar el proceso. En la zona las moléculas de látex (soporte del antígeno), han La reacción detecta fundamentalmente anticuerpos tornétrica, o inmunoenzirnático cuando el producto
de interacción se fom1a una banda de precipitación. hecho que se discontinúe su empleo. específicos ftjadores del complemento, los cuales se es precipitante y se visualiza en el sitio de reacción.
Es utilizada en el diagnóstico de cistiscercosis, unirán al antígeno y al complemento presente en el
fasciolosis e hidatidosis. Reacción de floculación con bentonita. Utiliza primer sistema; de esta fom1a, la reacción indicadora Reacción de ELISA clásica. Como soporte del
La desventaja de este método radica en su baja como soporte partículas de bentonita sensibilizadas no presentará hernólisis. La ausencia de anticuer­ antígeno o de los anticuerpos utiliza microplacas,
sensibilidad y requiere para hacerse positiva entre con el antígeno, el cual, al ponerlo en contacto con pos en el suero del paciente, dejará en libertad el tubos, esferas, discos de poliestireno o de polivinilo,
l O y 20 µg de anticue1pos por mL. Esta técnica, el suero del paciente reacciona evidenciándose la complemento que será fijado por la reacción las cuales son bloqueadas con proteínas no reac­
además, ha sido utilizada para la caracterización de reacción como floculación. indicadora apareciendo bernólisis. cionantes para evitar reacciones inespecíficas. Pos­
fracciones antigénicas parasitarias. Su mayor utilidad práctica se ha obtenido en el Debido a la gran cantidad de reactantes utiliza­ te1iornente, se agrega la muestra en esh1dio, facili­
diagnóstico de triquinosis. Debido a su buena espe­ dos, se requiere de una gran estandarización del tando la producción de la reacción antígeno-anti­
Reacciones de aglutinación cificidad y tardía sensibilidad (tres semanas posin­ método corno también una serie de condiciones en cuerpo. A continuación de una serie de lavados, se
fección) ha motivado su reemplazo por métodos de el suero en estudio, ya que la anticomplernentaiiedad utiliza un segundo anticuerpo marcado con la enzi­
Los antígenos pueden ser insolubles o solubles mayor precocidad en el diagnóstico de la infección de algunas muestras (sueros envejecidos, infecta­ ma, el cual se unirá a la reacción previamente for­
y se unen en fomia artificial a soportes insolubles, aguda por Trichinella spiralis. dos, hemolizados o lipérnicos), hace que las inmu­ mada. La visualización de la reacción se observará
dando como resultado final la aglutinación del sis­ noglobulinas desnaturalizadas y agregadas del sue­ a simple vista o mediante lectura espectrofotométrica
tema, al unirse con sus respectivos anticuerpos con­ La reacción de hemaglutinación indirecta ro, fijen inespecíficarnente el complemento, alte­ del producto coloreado fon11ado por la acción de la
tenidos en el suero. (RHAI). Ha sido ampliamente utilizada tanto en el rándose la discriminación entre una reacción posi­ enzima sobre el sustrato específico. Desde su des­
Las más comunes son la de aglutinación directa diagnóstico corno en estudios epidemiológicos de tiva o negativa. Todo ello ha hecho que esta reac­ cripción, este méto¡lo ha sido utilizado ampliamen­
y la de aglutinación pasiva, con sus diversas varian­ diversas parasitosis, debido a su buena sensibilidad ción no sea utilizada en el diagnóstico de rutina te en el diagnóstico de las parasitosis debido a su
tes. La unión de los antígenos a los soportes se y facilidad de ejecución. El soporte antigénico está parasitológica. alta sensibilidad. En la actualidad, debido a la uti­
puede hacer mediante enlaces de tipo no covalente constituido por glóbulos rojos de cordero o huma­ lización de antígenos insuficientemente purificados
directamente al soporte o acondicionando previa­ nos (grupo 0/fl/ Rh negativo). En el caso de los Reacciones que utilizan proteínas marcadas se han descrito reacciones cruzadas.
mente la superficie de los mismos. antígenos polisacarídicos la unión con el soporte es
directa, en tanto que para antígenos proteicos, la Las proteínas pueden ser marcadas con sustan­ Reacción de ELJSA reversa o invertida. El
Aglutinación directa. Utiliza al parásito como superficie de la célula debe ser tratada previamente cias fluorescentes (reacciones de inrnunofluorescen­ método trata de capturar inrnunoglobulinas especí­
antígeno, generalmente fom1olado, el cual aglutina con ácido tánico, aldehídos simples (fórmico, cia), moléculas radiomarcadas (radioirmmnoensayo), ficas presentes en baja concentración en el suero en
al unirse a los anticuerpos específicos (especial­ pirúvíco o glutárico) o cloruro de cromo, para expo­ o enzimas (métodos inmunoenzirnáticos). estudio. Para ello se inmoviliza la antiinrnunoglo­
mente lgM). Es de alta sensibilidad, excelente para ner ciertos grupos químicos y facilitar su adhesión. bulina al soporte sólido, haciendo posteriom1ente
el diagnóstico del período agudo de la infección, El tratamiento con fom1ol y glutaraldehído fija Reacciones de inmunofluorescencia. Debido a reaccionar la muestra problema, capturándose de
debido a que por lo general la reacción ofrece títulos la pared del glóbulo rojo de tal fom1a que el reactivo que anticuerpos marcados con sustancias fluores­ esta fom1a la inrnunoglobulina presente. Se revela
elevados, producto de la alta reactividad de los permanece estable por períodos de tiempo prolon­ centes como el isotiocianato de fluoresceína, la la reacción con un conjugado compuesto por el
anticuerpos lgM, los cuales disminuyen por efecto gado. La utilización de glóbulos rojos de cordero aurearnina-rodarnina u otras no pierden sus capaci­ antígeno específico unido a una enzima. Poste1ior­
del tratamiento del suero con mercaptoetanol ya obliga a realizar la absorción del suero en estudio dades inmunológicas, pueden ser utilizadas para la mente, al agregar el sustrato se producirá su degra­
que este reactivo, al reducir los puentes disulfuro de con dichas células sin sensibilizar, para eliminar la detección del complejo antígeno-anticuerpo. La vi­ dación y la formación de un produeto coloreado
las cadenas J de esta inmunoglobulina, la transfor­ presencia de anticuerpos heterófilos. sualización de·Ia reacción se efectúa a través de un proporcional a la lg específica presente en la mues­
ma de molécula pentamérica en monomérica. Esta microscopio de luz ultravioleta, el cual mediante tra con problema.
situación no se produce si los anticuerpos son del Reacción de Sabio y Feldman. Es una reacción una longitud de onda específica para cada fluoro­ Debido a la captura de inrnunoglobulinas de
tipo lgG. mediada por complemento (factor accesorio), en la cromo lo excita y emite una luz fluorescente visible baja concentración en las muestras en estudio, es el
Se ha utilizado preferentemente en el diagnós­ cual ante la presencia de anticuerpos en el suero del ópiicamente. método de elección para el diagnóstico de infeccio­
tico de la enfennedad de Chagas y de toxoplasrnosis paciente, produce una lisis parcial del parásito ha­ El método puede ser directo o indirecto, de acuer­ nes agudas y congénitas a través de la detección de
aguda y congénita. Actualmente no se recomienda ciéndole perder su capacidad de tinción vital con el do al número de anticuerpos marcados empleados. IgM e IgA específicas.
su empleo por sus resultadós inespecíficos. azul de metileno. Considerada corno la reacción El más frecuentemente utilizado es el método indi­
patrón en toxoplasrnosis debido a su alta sensibili- recto, pues pennite detectar anticuerpos de diversas Reacción de ELISA doble sandwich. Se puede
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1
574 PARASITOLOG/A MEDICA METODOS DE DIAGNOSTICO INDIRECTO 575

aplicar para la detección de anticuerpos y de antí­ muestra problema. La reacción antígeno-anticuer­ cia en los extractos parasitarios de un gran número Antígenos recombinantes. El desarrollo de la
genos. Para los primeros, se sensibilizan las placas po se visualizará mediante una reacción enzimática de glicoproteínas, lípidos y glicolípidos altamente tecnol?gia de AD� recombinante y la expresión en
_
bacterias, ha penmt1do
con una inmunoglobulina específica anti-lg, mar­ cuyo producto es precipitante. Este método, de ex­ inmunogénicos. la expresión e identificación
cadora de infección aguda que detectará los anti­ celente especificidad, se utiliza rntinariamente como de diversos genes de los parásitos que codifican
cuerpos específicos presentes en la muestra en estu­ prueba confinnatoria. Antígenos específicos de cepas. Los parásitos proteínas antigénicas, las cuales pueden ser utiliza­
dio. Con posterioridad se agregará el antígeno es­ circulan en el hombre y otros hospederos y los que das con fi �es diagnósticos. Estos antígenos defini­
pecífico y la reacción se detectará al utilizar un Reacciones intradérmicas son aislados en algunas infecciones, se compo1tan dos han sido obtenidos por tamizajes inmunológi­
anticuerpo anti-antígeno específico marcado con la como verdaderas cepas. Diversos experimentos han cos de bibliotecas genómicas o de cADN y son cons­
enzima. Producida la reacción antígeno-anticuer­ Permiten evidenciar los mecanismos de hiper­ demostrado diferencias antigénicas entre los distin­ truidas en vectores de expresión con insertos al azar
po, se detectará por el producto coloreado produci­ sensibilidad precoz y retardada frente a diversos tos parásitos aislados, pero estudios proteicos han de ADN parasitario.
do al emplear el sustrato enzimático específico. antígenos parasitarios. Presentan una serie de limi­ demostrado que en su mayoría presentan algunas La expresión de los vectores se efectúa en bac­
Para la determinación de antígenos se sensibili­ taciones en cuanto a sensibilidad y especificidad moléculas relativamente conservadas y, que por lo terias, las cuales después de un ciclo lítico produci­
zarán las placas con anticuerpos mono o polivalentes razón por la cual su uso es muy restringido en el general, se comportan como antígenos inmuno­ rán la proteína recombinante. La selección de las
anti-antígenos específicos, los cuales serán atrapa­ diagnóstico parasitológico de rutina. rrelevantes. Por esta razón un antígeno utilizado proteínas recombinantes antigénicas se efectúa prin­
dos desde la muestra problema. Posteriormente, al para inmunodiagnóstico deberá tener los epítopos cipahnente mediante descarte inmunológico.
agregar el anticuerpo específico marcado con la ANTIGENOS PARASITARIOS necesarios para que representen a las diferentes ce­ Se han utilizado antígenos recombinantes, ya
enzima específica, se producirá la reacción antíge­ pas. sea en métodos como ELISA o Dot inmunoenzi­
no-anticuerpo, la cual será detectada por el produc­ Una de las mayores limitaciones en el diagnós­ mático, en el diagnóstico de enfermedad de Chagas,
to coloreado obtenido al agregar el sustrato tico es la estandarización de los antígenos y ello se Antígenos estado específicos. En más de una hidatidosis, toxoplasmosis, faciolosis, etc., en todos
enzimático específico. debe, en gran medida, al escaso conocimiento que infección parasitaria, existen distintas formas bio­ ellos con excelente sensibilidad y altísima especifi­
A pesar de que el empleo de anticuerpos mono­ se tiene de la constitución bioquímica y de la inmu­ lógicas del parásito, las que a su vez, están presen­ cidad debido a que se emplean moléculas altamente
clonales en estas técnicas aumenta la especificidad nogenicidad de los distintos parásitos. La indivi­ tes en diferentes hospederos. Las caracterizaciones purificadas y definidas. La otra ventaja que presen­
del diagnóstico, no son utilizadas rntinariamente, dualización de un antígeno relevante y su distin­ efectuadas con anticuerpos monoclonales han de­ tan estos antígenos, es su producción en gran escala
ya que la tecnología de preparación de los diversos ción de los antígenos irrelevantes, requiere la iden­ mostrado claramente que muchos antígenos (espe­ con una reproductibilidad excelente y alta estanda­
reactantes empleados, es muy sofisticada. tificación y caracterización bioquímica de sus com­ cialmente los de superficie) son específicos para rización.
ponentes y el establecimiento de su inmun0genici­ cada estado, por lo cual se deberá seleccionar aque­
Dat i111111111aensayo (Dot ELlsAr Una serie de dad. llos que son representativós de los estadios evoluti­ Péptidos sintéticos. La deducción de las secuen­
membranas (nitrocelulosa, ínmulón, etc.) tienen la Un antígeno parasitario ideal requiere su pre­ vos en el hombre para su utilización como prepara­ cias aminoacídicas a partir de los antígenos recom­
capacidad de fijar en forma no covalente a molécu­ sencia en las distintas cepas aisladas en zonas de ciones poliantigénicas. binantes parasitarios utilizados, ha permitido esta­
las proteicas, lipopolilsacáridos, ácidos nucleicos, diferente endemicidad, no estar presente en otros blecer que la mayor parte de los antígenos parasita­
etc., constituyentes de los antígenos parasitarios. agentes de enfermedades infecciosas y no reaccio­ Epítopos comunes con otros agentes infeccio­ rios están compuestos por secuencias aminoacídicas
De esta fom1a, al incubar estos soportes sensibiliza­ nar con autoanticuerpos. Este antígeno debe ser sos. La serología se enfrenta a un gran desafio para repetidas a lo largo de la proteína, todas las cuales
dos con el suero en estudio, se unirán los anticuer­ altamente inmunogénico en poblaciones con dife­ la especificidad de sus métodos, debido a la comu­ son altamente antigénicas. Es por ello que la sínte­
pos al antígeno, los cuales posteriormente son reve­ rente acervo inmunogenético, debe ser capaz de nidad antigénica presente entre los distintos parási­ sis química de péptidos, ha sido utilizada con gran
lados por un método inmunoenzimático cuyo pro­ diferenciar las distintas formas clínicas de la infec­ tos y con otros agentes infecciosos no parasitarios, éxito en la producción de antígenos parasitarios con
ducto final es inmunoprecipitante. ción, estar además, presente en las distintas formas e incluso, moléculas propias del hospedero. La reac­ fines diagnósticos, los cuales pueden ser utilizados
Este método tiene la ventaja de utilizar peque­ biológicas parasitarias, incluso cuando estén pre­ tividad crnzada, por lo general, puede ser disminui­ en diversos métodos como ELISA, Dot imnunoen­
ñas cantidades de inmunorreactivos, de fácil alma­ sentes en escasa cantidad. Deben ser estables, haber da elaborando antígenos altamente purificados; sin zimático, RIA, etcétera.
cenamiento y no necesita espectrofotómetro. Sin cumplido un buen control de calidad y con una embargo, ello conlleva a una pérdida de sensibili­
embargo, debido a que las mezclas antigénicas que reproductibilidad garantizada. Algunos factores que dad de la prueba. INTERPRETACION DE RESULTADOS
emplea son muy complejas y poco purificadas, sus actúan sobre las condiciones previamente señaladas
resultados son inespecíficos. Ha sido una técnica son: APLICACION DE TECNICAS Tal como fue señalado con anterioridad, diver­
altamente empleada en unión a otros métodos, en el DE BIOLOGIA MOLECULAR sos factores deben ser considerados para la interpre­
diagnóstico de la hidatidosis, fasciolosis, cisticerco­ Complejidad antigénica. El alto grado de com­ tación de un resultado serológico. Algunos de ellos
sis, enfermedad de Chagas y otras parasitosis. plejidad en la constitución molecular parasitaria, va Uno de los mayores beneficios de la medicina dependen del método empleado (sensibilidad), de
más allá de los límites de resolución y/o sensibili­ moderna ha sido el incorporar los avances de la los antígenos empleados (especificidad), de la apli- .
lnm1111ab/ot o i11m1111oe/ectrotransferencia. De dad de las técnicas bioquímicas e ínmunoquímicas inmunoquímica, la imnunobiología y la biología cación que se le quiera dar (diagnóstico clínico o
gran utilidad para el estudio de mezclas inmunogé­ aplicadas en la actualidad para estos análisis. Es así molecular a los procedimientos diagnósticos del epidemiológico), y de la situación del hospedero en
nicas complejas. Primeramente las separa mediante como un extracto parasitario presenta cientos de laboratorio. La aplicación de las técnicas de biolo­ estudio (si se trata de infección aguda o crónica,
gía molecular ha permitido la producción de antíge­ infección congénita, infección del sistema nervioso

1
una electroforesis en geles de poliacrilamida en los componentes antigénicos, muchos de los cuales son
constituyentes polipeptídicos que la conforman, imposibles de definir y diferenciar ya que depen­ nos altamente específicos y en gran cantidad, elimi­ central o si es paciente inmunocomprometido).
según su peso molecular. Posteriormente, los poli­ den, en gran medida, del nivel de expresión de cadá nándose la engorrosa mantención de cultivos in La definición de la aplicabilidad del método es
péptidos son transferidos, mediante una electrofo­ uno de ellos. vitro o in vivo, produciéndose por procesos biotec­ muy importante, puesto que debe considerar situa­
resis horizontal, a un soporte como nitrocelulosa en Otra variable que debe ser considerada es la nológicos y asegurando de esta forma, su reproduc­ ciones tales como su utilización en gran escala (ban­

l
el que serán detectados los antígenos por los anti­ presencia de un mismo epitopo en antígenos dife­ tibilidad. cos de sangre, estudios epidemiológicos), factores
cuerpos, al incubar el soporte sensibilizado con la rentes, la configuración espacial similar, la presen- técnicos (método simple, de rápida ejecución, alta-
576 PARASJTOLOGJA MEDICA

mente reproducible, sensible y/o específico), como El estudio de infecciones del sistema nervioso
l
también situación diagnóstica del hospedero (caso central se facilita con el análisis de muestras de
clínico único o estudio epidemiológico). suero y de líquido cefalorraquídeo, humor vítreo o
Otra situación que se debe considerar es la fase acuoso para pesquisar anticuerpos formados in si/u.
de la infección que se desea diagnosticar. Para ello El estudio del paciente inmunocomprometido
se deberá seleccionar el método más sensible e ideal­ también tiene diversas situaciones que deben ser
mente aquel que detecte diversas inmunoglobulinas consideradas, debido a la baja o ninguna produc­
específicas (IgM e IgA). Además, si el cuadro co­ ción de anticuerpos, la posible presencia de anti­
rresponde a una sospecha de infección congénita, es cuerpos pasivos por transfusión sanguínea o la res­
aconsejable el estudio del binomio madre e hijo y el puesta policlonal provocada por diversas infeccio­
seguimiento del recién nacido seropositivo para IgG nes concomitantes.
hasta la negativización de la serología y el descarte Finalmente, debe ser claramente reconocido que
de anticuerpos pasivamente transmitidos. También los métodos de laboratorio constituyen técnicas de
es relevante el seguimiento durante el tratamiento apoyo al diagnóstico, pero, por sobre ellos, los an­
médico o quirúrgico de algunas parasitosis, puesto tecedentes clínicos y epidemiológicos son los que el
que permitirá evaluar su efectividad por medio de la médico deberá considerar para la toma de decisio­
curva serológica. nes.
SEPTIMA PARTE
Trata1niento
T ·�7·\ ...·�·. ':
1
..

Capítulo 66

TRATAMIENTO DE LAS PARASITOSIS


Y TABLAS TERAPEUTICAS
ANTONIO ATIAS

Hasta los años 30, el arsenal terapéutico en pa­ CONSIDERACIONES GENERALES


rasitología era escaso y, muchas veces, poco eficaz.
Al ya centenario uso de la quinina, que constituye Antes de prescribir un medicamento para algu­
aún hoy, un medicamento válido para el tratamien­ na parasitosis, deben considerarse diversos factores
to del paludismo, se agregó a mediados de la década que son decisivos para alcanzar el éxito terapéutico.
del 20, el uso del clorhidrato de emetina para el
tratamiento de la amibiasis y, hacia 1930, aparecie­ Diagnóstico de certeza. Debido a que en la
ron los "viaformos" de aceptable eficiencia anti­ mayoría de las parasitosis no hay signos ni sínto­
amibiana. Sin embargo, el panorama del tratamien­ mas patognomónicos, la sospecha clínica no basta
to antihelmíntico era muy pobre. Sólo se contaba para el diagnóstico y, por lo tanto, debe encontrarse
con preparados a base de timol, aceite de quenopo­ el parásito, sus larvas, quistes o huevos, anticuerpos
dio, la santonina, el hexilresorcinol y algunos más, o antígenos parasitarios, antes de emprender cual­
entre ellos hasta las domésticas pepas de zapallo. quier acción terapéutica. De regla, el diagnóstico de
Esos eran los medicamentos que debían manejar los certeza se logra más frecuentemente en las entero­
médicos de entonces. parasitosis; en cambio, en las histo y hemoparasitosis
El "boom" farmacológico en parasitologia co­ el hallazgo del parásito suele ser más dificil y, mu­
mienza en plena Segunda Guerra Mundial. Como chas veces, el diagnóstico se basa en los anteceden­
ha dicho más de un autor, las tropas occidentales tes epidemiológicos, en el cuadro clínico y en prue­
destacadas en ultramar solían tener más bajas por el bas inmunobiológicas.
paludismo, filariosis, leishmaniosis y disentería, que
por la acción bélica del enemigo. Acicateados por Tratamiento específico. Ante la multiplicidad
esta realidad, los científicos abordaron la terapia y de medicamentos disponibles, es recomendable acos­
el control de las parasitosis de un modo racional. tumbrarse a manejar bien uno o dos para cada para­
Mediante estudios multidisciplinarios que abarca­ sitosis. Esto crea la experiencia necesaria para co­
ron la biología de los parásitos, sus ciclos evoluti­ nocer su grado de tolerancia y poder ajustar las dosis
vos, sus cadenas metabólicas y el marco ecológico en cada paciente. Además, es necesario conocer el
de su desenvolvimiento, se acrecentó el conocimiento costo del tratamiento, porque la diferencia de pre­
de las parasitosis y permitió actuar en aquellos pun­ cios entre los medicamentos suele ser muy grande.
tos débiles de su desarrollo. Bajo esta perspectiva,
surgen fármacos de gran trascendencia, y en la ac­ Tratamiento sintomático. Junto con las medi­
tualidad se cuenta con un espectro cada vez más das dietéticas adecuadas a cada caso, se debe procu­
amplio de drogas antiparasitarias polivalentes y muy rar el alivio de las molestias con fám1acos sinto­
eficaces. máticos (antiácidos, antiespasmódicos, antidia­
Actualmente, el tratamiento de las parasitosis es rreicos inespecíficos, tranquilizantes menores, etc).
un acontecimiento diario en la práctica médica que
obliga recordar nombres, a retener posologías y, Grupo familiar. Dadas las condiciones epide­
muchas veces, el médico ya acostumbrado a deter­ miológicas de transmisíbilidad, algunas parasitosis
minados fármacos, debe incorporar novedades que afectan, simultáneamente, a varios miembros del
aparecen en el ·mercado farmacéutico, lo que hace grupo familiar. En enterobiosis este fenómeno es
dificil cuál o cuáles escoger. tan evidente que se debe tratar a toda la familia
Este capítulo no pretende ser exhaustivo ni en­ cuando se ha diagnosticado fa infección en uno de
ciclopédico y sólo refleja la experiencia de un grupo sus miembros. También puede exi�tir más de un
de médicos. Por lo tanto, si no son mencionados familiar con la parasitosis por haberse expuesto a la
algunos fármacos, es porque no han tenido oportu­ misma fuente de infección, como típicamente ocu­
nidad de formarse un juicio adecuado sobre ellos, rre en la triquinosis y en la fasciolosis. En otras
razón por la cual su exclusión no significa de nin­ parasitosis, como en la amibiasis, juegan un papel
guna manera que no sean útiles. importante factores domésticos de transmisión
580 PARASITOLOG!A MEDICA

intrafamiliar como, por ejemplo, la manipulación desventaja de que deben adminstrarse muchas ta­
1 TRATAMIENTO DE LAS PARAS/TOSIS l'TABLAS TERAPEUT!CAS

te autolimitados, pero en ocasiones son de gran Tricocefalosis


581

de alimentos, pero en estos casos es necesario com­ bletas diarias por diez días. severidad y pueden durar varias semanas en su re­
probar. efectivamente la infección en otros compo­ Para los casos con sintomatología leve o atenua­ solución. Actualmente se ha aceptado que en la Hasta la aparición del mebendazol, el tratamiento
nentes del grupo que convive con el enfenno. da se puede utilizar la paromomicina, antibiótico de isosporosis la asociación trimetoprim-sulfametoxa­ de la tricocefalosis era realmente dificil. Adminis­
acción casi específica contra E. hystolitica (25-35 zol (cotrimoxazol) en dosis habituales, mejora sinto­ trado en dosis de 200 mg x 2 veces x 3 días, se
Educación para la salud. La entrevista con el mg/k x 5-10 días). Otros medicamentos que se pue­ máticamente a estos pacientes. En algunos casos, obtiene la erradicación de gran parte de los helmin­
médico es una oportunidad única para impartir una den emplear son el clorhidrato de tetraciclina que especialmente inmunocomprometidos o con el sín­ tos en la tJ.icocefalosis masiva, entidad que tiene la
instrucción básica que abarque, en ténninos muy actúa sobre el 95% de los pacientes con disenteria, drome de inmµnodeficiencia adquirida (SIDA), el mayor importancia clínica. El albendazol en dosis
sencillos, el ciclo evolutivo del parásito, los meca­ aunque presenta un alto porcentaje de recaídas, y la cuadro gastrointestinal tiende a la reactivación al de 400 mg x 3 días, también es eficaz, aunque
nismos de transmisión y las principales medidas de cloroquina (derivado 4-aminoquinolínico), la cual suspender el medicamento. Aún de mayor impor­ pareciera tener un éxito algo menor que el meben­
prevención para evitar las reinfecciones del enfer­ si bien es eficaz en el absceso hepático, no es efec­ tancia son las medi.das generales, como el reposo en dazol.
mo y de su grupo familiar. tiva en la amibiasis intestinal; usado como medica­ caso necesario, hidratación y reposición de eletró­
mento único, se administra 500 mg/día por diez litos, régimen sin residuos y espasmolíticos cuando Anquilostomosis
Control del tratamiento. El control del pacien­ semanas, pero este régimen de tratamiento se puede se requiera.
te es esencial no sólo para evaluar el tratamiento, acortar a cuatro semanas si se emplea emetina du­ Para su tratamiento se emplean el pamoato de
sino para estar atentos ante la posible aparición de rante los diez primeros días. Criptosporidiosis pirantel, la combinación pirantel/oxantel pamoatos,
efectos colaterales. Si el paciente continuara con la La emetina y la dehidroemetina continúan sien­ y los benzoimidazólicos (mebendazol, albendazol).
sintomatología, no se le debe someter a una nueva do drogas de primera línea para el tratamiento de la Evoluciona con una diarrea aguda, autolimita­ Además, en zonas en las cuales predomina la infec­
terapia, con el mismo u otro fánnaco, sin efectuar amibiasis, eficaces para dominar rápidamente los da, que en algunos casos puede ser algo más prolon­ ción por A11cy/osto111a duodena/e, se sigue utilizan­
previamente los exámenes pertinentes que confir­ síntomas de las fonnas graves intestinales y extra­ gada e intensa, especialmente en lactantes, requi­ do el hidroxinaftoato de befenio.
men la persistencia de la infección. La causa de la intestinales. Se administran por vía parenteral como riendo sólo de medidas generales de apoyo al pa­ Como en otras parasitosis, pero especialmente
sintomatología puede ser ajena a la parasitosis y eso máximo durante diez días. La dosis de emetina es ciente (hidratación, reposición de electrólitos, régi­ en la anquilostomosis, el tratamiento debe comple­
evitará prescribir fánnacos inútiles y potencialmen­ 1 mg/kg diario (sin exceder de 60 mg) por diez días, men sin residuos y pobre en lactosa) mentarse con medidas adicionales, las cuales son
te peligrosos. y la dosis de dehidroemetina es de 1,0-1,5 mg/día Es en los pacientes inmunocomprometidos don­ tan importantes como la terapia específica: régimen
(máximo 90 mg), también por diez días. Estos agen­ de la infección adquiere mayor gravedad, ya que es hipercalórico y aporte suficiente de hierro, proteí-
TRATAMIENTO tes tienen escasa eficacia sobre E. histolytica lumi­ particulannente agresiva y refractaria al tratamien­ nas y vitaminas.
DE LAS ENTEROPARASlTOSlS nal, por lo cual debe administrarse simultáneamen­ to, poniendo en riesgo la vida del paciente. En estos
te otro amibicida de acción intestinal. En casos casos, se han probado numerósos agentes quimiote­ Estrongiloidosis
Amibiasis graves y con peligro de muerte (por ejemplo, perfo­ rapéuticos, principalmente en pacientes con SIDA,
ración intestinal), se recomienda la administración sin haber logrado hasta la fecha, resultados satisfac­ Como medicamento de elección todavía se reco­
El médico dispone de muy variados medica­ simultánea de emetina o dehidroemtina y de metro­ torios. mienda el tiabendazol. Recientemente se han co­
mentos para la dificil tarea de su tratamiento. Algu­ nidazol endovenoso hasta la estabilización del pa­ La espiramicina que apareció en su momento municado resultados esperanzadores con el uso de
nos son eficaces para la erradicación simultánea de ciente, seguido de un agente terapéutico activo para como un fánnaco eficaz, no ha demostrado efectos la ivennectina.
la infección amibiana luminal y la amibiasis inva­ los elementos luminales de E. histolytica. mayores a los d�l placebo en estudios bien contro­
sora tisular, otros actúan sobre una y otra, pero lados. Entre los macrólidos, la azitromicina tiene Enterobiosis
todavía no existe un fánnaco eficaz para el 100% de Balantidiosis una acción favorable a nivel experimental. Otras
los casos. En la actualidad, los derivados nitro­ comunicaciones, dan resultados favorables con el Como medicamento de primera línea se utiliza
imidazólicos, en particular el metronidazol y el tini­ Los raros casos de balantidiosis responden bien uso de octreatide, el factor de transferencia bovino el pamoato de pirantel y los derivados benzoimi­
dazol, se han constituido en los principales medica­ al uso de los derivados nitroimidazólicos, especial­ y el calostro bovino. Aparentemente, la paromomi­ dazólicos (mebendazol y albendazol). Administra­
mentos para el tratamiento de esta parasitosis. mente el metronidazol, la tetraciclina y la paromo­ cina, en dosis de ataque de 2.000 mg durante 4 dos en dosis única, son muy bien tolerados y curan
El metronidazol actúa tanto en la amibiasis tu­ micina. semanas y 1.000 mg como dosis de mantención, ha la parasitosis en más del 95% de los casos.
minal (portadores y eliminadores asintomáticos de demostrado una acción favorable en el 50% de los Con estos medicamentos tan eficaces, parecería
quistes) como en la amibiasis invasora tisular (tro­ Giardiasis casos de criptosporidiosis; sin embargo, al suspen­ que la enterobiosis sería una infección fácilmente
fozoítos). Existen variados esquemas terapéuticos, der el tratamiento, los pacientes recaen. erradicable, pero sin duda, es la de tratamiento más
pero lo más aceptado es 1.500-2.000 mg adminis­ Los nitroimidazólicos, debido a que se utilizan complejo, debido a la complicada biología del En­
trados en tres dosis diarias por diez días, para la en dosis relativamente bajas durante pocos días, y Ascariasis terobius ver111icularis. Por ello, se debe insistir en el
mayoría de las infecciones. por sus cómodas presentaciones en comprimidos o tratamiento simultáneo de todo el grnpo familiar,
El tinídazol, administrado por períodos breves, suspensión, constituyen los medicamentos preferi­ Para la erradicación del Ascaris lu111bricoides se además de una serie de medidas destinadas a elimi­
es eficaz para las fonnas disentéricas (dos a tres dos para el tratamiento de la giardiasís, tan frecuen­ cuenta con fánnacos de primera línea y eficaces en nar el ambiente oxiuriótii:o que rodea a las personas
días) y para el absceso hepático (cinco días), dado te en los niños. La furazolidona también es un buen dosis única como el pamoato de pirantel y los deri­ parasitadas.
conjuntamente con otros medicamentos; sin embar­ fánnaco contra esta parasitosis, con la relativa ven­ vados benzoimidazólicos, mebendazol y albenda­
go, no es recomendable para el tratamiento de los taja de su acción antibacteriana asociada. zol. Cestodosis intestinal
portadores asintomáticos. En estos casos, se utiliza, El pamoato de pirantel se utiliza en dosis única
como ya se mencionó, el metronidazol, o bien las Isosporosis de 10 mg/kilo y el mebendazol y albendazol se Por su potente acción contra los platelmintos, la
hidroxiquinolinas halogenadas (diyodohidroxiqui­ administra también en dosis únicas de 400 mg. droga de elección es el prazicuantel, que es una
nolina) que son bien toleradas, pero presentan la Produce cuadros gastrointestinales, habituahnen- pirazinisoquinolina heterocíclica que actúa sobre el
T �I

582 PARASITOLOGIA MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARASITOSIS l'TABLAS TERAPEUTICAS 583

sistema neuromuscular del parásito. Usado en dosis 26. Malaria). Con este fin, la cloroquina es de tos que curen todas las fases de esta infección pa­ mutuas. Por los posibles efectos secundarios de
única, de 1O mg/kg de peso para las Taenia solium elección, excepto para algunas cepas de P rasitaria. Los dos fármacos más utilizados son el estas drogas, su uso debe ser cuidadoso en las
y T. saginata, y de 25 mg/kg de peso en difilo­ falciparwn resistentes, en los cuales es eficaz una nifurtimox y el benznidazol. Si bien ambos actúan embarazadas. Recientemente, se ha comunicado la
botriosis, tiene un alto rendimiento terapéutico y combinación de pirimetamina-sulfadoxina sobre los parásitos circulantes e incluso con casos existencia de cepas de tricomonas resistentes al me­
casi ausencia de efectos colaterales, constituyéndo­ (Fansidar®) y primaquina como gametocida. Ya se de curación en la fase aguda de la infección, los tronidazol.
se en el cestocida de elección. Además, el hecho de ha descrito en algunas áreas resistencia de este resultados son discordantes en cuanto a la destruc­
no usar dieta ni purgantes, lo hace de fácil adminis­ plasmodio al Fansidar®, donde la alternativa es el ción de los nidos de amastigotos en los tejidos. Amibas de vida libre
tración y es bien tolerado por el paciente. Por la uso de mefloquina o de doxiciclina. Además, producen con frecuencia intolerancia por
alteración y desintegración que provoca a nivel del Para las crisis palúdicas se usan drogas esqui­ parte del paciente. Contra Naegleria son activas in vitro algunas
tegumento de la lombriz, no es posible recuperar el zonticidas, como cloroquina y amodiaquina. La pri­ Además de estos dos fármacos, se han ensayado drogas como la anfotericina B, miconazol y rifam­
escólex, por lo que se debe esperar entre dos y tres mera es de efecto rápido y es la droga de elección. muchos medicamentos, tales como el alopurinol y el picina. En el manejo de esta grave infección se ha
meses para verificar el éxito de la terapia. Frente a cepas de P.falciparum resistentes, se uti­ itrakonazol, de resultados todavía inciertos. comunicado éxito terapéutico con el uso combinado
La niclosamida fue el medicamento de elección lizan distintas asociaciones de medicamentos. de anfotericina B y miconazol.
por mucho tiempo. Para el tratamiento de las "lom­ La quinina, en la actualidad, rara vez se usa sola, Toxoplasmosis Para el tratamiento de la infección con Acant/za­
brices solitarias" (Taenia saginata, T. solium, puesto que es tóxica, mal tolerada y de menor efica­ moeba, se utiliza la sulfoterapia y, como alternativa,
Diphyllobothrium spp.), y en los raros casos de cia como agente supresivo y terapéutico que la Para la toxoplasmosis aún se elige la acción se ha intentado el uso de isotianato de pentamidina
infección accidental del niño producido por la ces­ cloroquina; carece también del efecto profiláctico sinérgica de la pirimetamina y de las sulfamidas, con o de polirnixina B en dosis altas.
todosis de los perros (Dipylidium caninum) y de causal de la pirimetamina y cloroguanida. En el pa­ estricto control médico. Se recomienda agregar su­
las ratas (Hymenolepis diminuta). Es necesaria una ludismo pernicioso y en los pacientes graves que no plemento de ácido folínico para evitar efectos tóxi­ Filariosis, on�ocercosis
preparación previa del paciente, con un régimen lí­ toleran la medicación por vía oral, la quinina sigue cos. La espiramicina es un medicamento alternativo,
quido durante la tarde y la noche anteriores al día siendo de gran utilidad, administrada lentamente por especialmente para el tratamiento de las embaraza­ La dietilcarbamazina tiene una potente acción
del tratamiento. Habitualmente, se permite un al­ vía endovenosa, con vigilancia de la presión arterial, das o de los pacientes con intolerancia a la microfilarícida en las filariosis por Wuchereria
muerzo blando, sin residuos y, en la tarde y noche pulso y ECG. pirimetamina. bancrofti, Brugia spp. y Loa loa; en cambio, aunque
de ese día, líquidos a discreción con una taza de té En el paludismo recidivante, especialmente por P. La alternativa de tratamiento en toxoplasmosis es muy usada contra las microfilarias de Onchocerca
o café con leche, alrededor de las dieciocho horas. viva.-r:, se usan medicamentos que curan en forma ocular y en inmunocomprometidos, son tratadas en volvulus, los pacientes se exponen a intensas reac­
A la mañana siguiente se administra, en ayunas, el radical, por eliminación de las formas tisulares tardías. detalle en el Capítulo 29. Toxoplasmosis. ciones alérgicas que se pueden prevenir con la prue­
medicamento desleído o masticado y con té puro La primaquina es el mejor y el menos tóxico; además ba de Mazzotti. Por otra parte, la ivermectina es
azucarado. Si bien el hallazgo del escólex permite presenta efecto gametocida contra las cuatro espe­ Neumocistosis altamente eficaz como microfilaricida en O. volvulus
establecer de inmediato la curación, no encontrarlo cies y, en especial paraP.falciparum, previniendo de y provoca pocos efectos colaterales, además de po­
no significa, necesariamente el fracaso del tratamien­ este modo, la infección de los mosquitos. En la actualidad se utilizan el trimetoprim-sul­ seer un posible efecto inhibidor de la postura de
to. Por lo tanto, no debe repetirse, salvo si el pa­ La pirimetamina y la cloroguanida, además de ser fametoxazol (cotrimoxazol), el trimetoprim-dapsona microfilarias por las hembras del parásito. El
ciente volviera a eliminar proglótidas, lo que ocurre activos en la profilaxis y como esquizonticidas de (maloprim) y el isotianato de pentamidina. Suramin®, si bien tiene un claro efecto microfilaricida
en un plazo de dos a tres meses. Si el médico desea acción lenta, son esporozonticidas al inhibir la mul­ En las formas leves, la neumocistosis se trata por en la filariosis por W. bancrofti y macrofilaricida
facilitar la búsqueda de escólex, debe indicar dos tiplicación del parásito en los Anopheles. vía oral con cotrimoxazol o con trimetroprimdapsona, contra O. volvulus, presenta una peligrosa e impre­
medidas adicionales. 1) el lavado intestinal en la La aparición de resistencia a algunos o todos los durante catorce días en el inmunocomprometido y decible toxicidad, lo que no justifica su uso en la
noche anterior al tratamiento, y 2) hacer que el pa­ antimaláricos, es un problema que obliga a la bús­ durante veintiun días en el SIDA. Como alternativa actualidad.
ciente obre en un recipiente adecuado después de queda permanente de nuevas drogas eficaces y bien se emplea la pentamidina intravenosa por catorce
ingerir un purgante salino junto con la segunda toleradas. La mefloquina, la halofantrina y las días y por veintiún días en el SIDA. Triquinosis
dosis del medicamento, para enviar luego las heces artemisininas constituyen los hallazgos terapéuticos
a un laboratorio idóneo para su examen. más promisorios. Microsporidiosis Aún no se cuenta con medicamentos capaces de
La himenolepiosis se trata con prazicuantel 25 asegurar la erradicación de las larvas de Trichinel/a
mg/k en dosis única, con rangos de curación entre Leishmaniosis De un gran número de medicamentos ensayados, enquistadas en la musculatura esquelética. De allí
80y 100%. los de mejores resultados han sido el albendazol y la que, en la mayoría de los casos, el tratamiento deba
Los medicamentos de primera linea son compues­ fumagilina tópica. El uso de albendazol ha sido exi­ ser sintomático. Sin embargo, algunos derivados
TRATAMIENTO tos antimoniales pentavalentes como el estil­ toso en el tratamiento de Encephalitozoon benzoimidazólicos presentan cierta acción sobre los
DELAS HISTOP ARASITOSIS Y bogluconato de sodio (Pentostam®) y el antimonia­ intestina/is, pero no tanto en Enterocytozoon bie­ gusanos adultos en el intestino y sobre las larvas
HEMOPARASITOSIS to de meglumina (Glicantime®). Cuando existe resis­ neusi.La fumagilina tópica se ha empleado con éxito enquistadas.
tencia a la terapia antimonial, se utiliza la pentamidína en las formas oculares producidas por Ence­ El tiabendazol ha demostrado su eficacia en la
Malaria en la leishmaniosis visceral y la anfotericina B en las plzalitozoon /zel/em. fase intestinal de la infección, al actuar sobre los
formas mucocutáneas. helmintos adultos allí localizados. También es efec­
Son varios los esquemas de tratamiento y los Todos estos medicamentos son potencialmente Tricomonosis tivo sobre las larvas que están en víai; de enquistar­
medicamentos que pueden utilizarse. La eficacia tóxicos y deben ser manejados con sumo cuidado. se en la musculatura. Respecto del mebendazol, si
está relacionada con la especie de plasmodio infec­ Se ha avanzado mucho en el tratamiento de la bien hay evidencias experimentales de su acción
tante y su fase de desarrollo. En la quimioprofilaxis Enfermedad deChagas tricomonosis con el uso de los derivados nitroimi­ larvicida, no existen pruebas suficientes en la triqui­
las drogas deben administrarse en el período de dazólicos, los que siempre deben administrarse si­ nosis humana que apoyen este efecto. El albendazol,
exposición y semanas después. (Véase el Capítulo Hasta el presente, no se cuenta con medicamen- multáneamente a la pareja para evitar reinfecciones por su mayor grado de absorción intestinal, teóricamen-
584 PARASITOLOG!A MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARASITOSIS Y TABLAS TERAPEUTICAS 585

te permitiría una mayor posibilidad de acción contra con el uso de la oxamniquina y del prazicuantel, los pediculosis. El azufre, utilizado al 5% en vaselina o Contraindicaciones. Embarazo.
las larvas enquistadas. cuales han desplazado a una serie de drogas que hoy mezcla hidratante durante una semana, ha demostra­
Durante el período de estado se debe usar me­ ya no se recomiendan por su alto grado e intoleran­ do bastante eficacia en el tratamiento de la sarna. ANFOTERICINA B
didas sintomáticas. En los casos más leves, está cia y toxicidad. En el latrodectismo se obtienen resultados es­
indicado el uso del ácido acetisalicílico y anti infla­ La oxaminiquina es muy activa contra Schisto­ pectaculares con el uso de la neostigmina. En el Indicaciones. Leishmaniosis mucocutáneas '
matorios no esteroidales y, en los graves, los cor­ soma mansoni, pero no actúa sobre S. haematobium loxoscelismo cutáneo el uso parenteral y luego oral amibas de vida libre (Naegleriafowleri).
ticoides. y S.japonicum; se prescribe en dosis única, produce de antihistaminicos, disminuye la duración del cur­
curación en una alta proporción de los casos y pre­ SQ de la lesión local, ayuda a circunscribirla y, lue­ Mecanismo de acción. Altera la permeabilidad de
Angiostrongilosis abdominal senta escasas y pasajeras reacciones adversas. El go, cuando la (;ostra cae, la superficie cruenta es la membrana celular, aumentando la salida de K+, por
prazicuantel es activo contra todas las especies de menor, haciendo en ocasiones innecesarios los in­ unión firme a grupos esteroles de la membrana.
El tratamiento es claramente quirúrgico cuando
esquistosomas que parasitan al hombre; se usa en jertos de piel. Para las lesiones extensas del loxo­
se presenta como apendicitis aguda, suboclusión Posología. 25-30mg x 8 semanas iv.
dosis única y proporciona un porcentaje de curación celismo cutáneo, se ha preconizado el uso de
intestinal y otras formas de abdomen agudo. En los
casos no quirúrgicos se utilizan los derivados ben­ y efectos laterales semejantes a la oxamniquina. dapsona 50a 200mg/día durante diez a veinticinco
Aquellos pacientes tratados y no curados con días, con muy buenos resultados; sin embargo, su Efectos adversos. Con frecuencia produce esca­
zoimidazólicos, especialmente el mebendazol a dosis lofríos, fiebre, vómitos y cefalea. Puede provocar
estas drogas, presentan una evidente disminución empleo debe quedar restrigindo a los casos cutá­
de 50 a 75 mg/kg durante dos semanas. daño hepático o re.na!, anemia, shock, bipocaliemia y
del número de huevos de S. mansoni en sus heces. neos graves, ante la posible aparición de anemia
Por otra parte, los rangos de curación se relacionan hemolítica. Las formas sistémicas del loxoscelismo síntomas neurológicos.
Larvas migrantes
con el estado evolutivo y gravedad del cuadro clíni­ deben ser tratadas, dentro de las primeras seis horas
Para la forma cutánea se recomienda el uso de co; en las formas hepatoesplénícas iniciales, la cura­ del accidente, con el suero antiveneno que fabrica Contraindicaciones. Daño renal.
tiabendazol oral y tópico, la congelación de la larva ción es la regla, pero aquellos pacientes con hiper­ el Instituto Butantán de Brasil; sin embargo, no
con cloruro de etilo, albendazol por 3 días o tensión portal severa deben ser tratados, además, siempre se cuenta con éste, por lo cual se recomien­ BEFENIO (HIDROXINAFTOATO)
ivermectina a dosis única. quirúrgicamente para lograr la descompresión del da el uso de corticoides por vía parenteral, que da
En el síndrome de larva migrante visceral no se sistema portal. buenos resultados. Indicaciones. Anquilostomosis (Ancylostoma
dispone de medicamentos muy efectivos; se han En los casos de cuadros locales o sistémicos duodenale).
obtenido resultados variables con el uso de tiaben­ Paragonimosis y otras trematodosis provocados por picadura de insectos, se utilizan
dazol oral y de la dietilcarbamazina En la toxocarosis antihistamínicos por diversas vías, según la grave­ Mecanismo de acción. Provoca contracción mus­
ocular se han intentado muchos medios terapéuti­ El medicamento de elección es el prazicuantel25 dad del paciente. La desensibilización progresiva cular similar a la acetilcolina. En altas dosis produce
cos, en general con pobres resultados: corticoides mg/kg durante dos a tres días, lo que aseguraría la con el extracto venenoso correspondiente es un mé­ parálisis muscular irreversible.
locales y sistémicos, tiabendazol, dietilcarbamazina, curación sobre el 95% de los casos. todo que puede utilizarse con éxito, pero no está
además de coagulación con rayos láser y vitrectomía. exento de reacciones adversas de importancia. Posologia. 5g x 3 días.
Los mejores resultados parecieran haberse obtenido Fasciolosis
con albendazol. CARACTERISTICASPRINCIPALESDEALGU­ Efectos adversos. Náuseas y vómitos por su sa­
Para esta parasitosis está indicado el tricla­ NOSFARMACOSANTIPARASITARIOS bor amargo. Ocasionalmente causa diarrea.
Hidatidosis bendazol durante uno o dos días, con buena eficacia
y pocos efectos laterales. Desgraciadamente, el pra­ ALBENDAZOL Contraindicaciones. Embarazo.
El tratamiento indicado es la resección quirúrgica zicuantel, tan eficaz en platelmintos, tiene escasa
de los quistes. Respecto al uso de quimioterápicos, acción sobre F. hepatica debido al grosor y compo­ Indicaciones. Ascariasis, tricocefalosis, entero­ BENZNIDAZOL
los derivados benzoimidazólicos (mebendazol y sición de su tegumento. La dehidroemetina y la biosis, anquilostomosis, microsporidiosis (principal­
albendazol) han demostrado ser activos contra el emetina, si bien son eficaces, presentan serios in­ mente en Encephalitozoon intestina/is, menos Indicaciones. Enfermedad de Chagas.
quiste hidatídico; sin embargo, el éxito global obte­ convenientes por sus efectos secundarios, además efetivo en Enterocytozoon bieneusi), triquinosis,
nido en estudios multicéntricos no han sobrepasado de que en algunos países no se expenden. larvas migrantes, hidatidosis, neurocisticercosis. Mecanismo de acción. Es un derivado 2-nitro­
el 10%. Por ello, el tratamiento con este tipo de imidazólico que bloquea la síntesis de ácidos nu­
fármacos debe quedar reservado; por ahora, para TRATAMlENTODEINFECCIONES Mecanismo de acción. Inhibe la captación de cleicos en forma activada, conjugándose al ADN.
casos especiales., como los quistes inoperables o YENFERMEDADESPROVOCADAS glucosa, con lo cual disminuye la síntesis de ATP.
hidatidosis secundarias. PORLOSARTROPODOS Tiene una absorción intestinal superior al mebenda­ Posologia. 1O mg/kg x 30días.
zol.
Cisticercosis Para el tratamiento de la pediculosis y de la sama, Efectos adversos. Las manifestaciones de intole­
En los casos de cisticercos únicos y abordables, lo que más se utiliza es el lindano o gamexano al 1%, Posología. rancia son frecuentes, especialmente cutáneas (pru­
según normas de aplicación bien estrictas. Otras Ascariasis, enterobiosis 400mg x 1 día rito generalizado, urticaria, exantema y edema rojo
como en la cisticercocis ocular, el tratamiento es
sustancias empleadas son la decametrina y el Anquilostomosis 400 mg x 3 días pruriginoso).
quirúrgico. En la neurocisticercosis, el uso del pra­
zicuantel y del albendazol ha mejorado notablemente crotamitón, aunque el tratamiento en estos casos Triquinosis, larvas migrantes . 400mg x 7días
el pronóstico de la afección. debe prolongarse por algunos días. Estas dos últi­ Microsporidiosis, hidatidosis, cisticercosis. Contraindicaciones. embarazo
mas tendrían la ventai,a de no ser absorbidas a nivel 400mgx21-30días
Esquistosomosis de la piel y, por lo tanto, estarían indicadas en lac­
tantes cuando existe piel muy erosionada. El car­ Efectos adversos. Raros. Dolor abdominal y leu­
El avance en su tratamiento ha sido muy evidente barilo es otro insecticida eficaz para combatir la copenia.
586 PARASITOLOGIA MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARASITOSIS l' TABLAS TERAPEUTICAS 587

CLINDAMICINA Contraindicaciones. Enfermedades hepáticas y Contraindicaciones. Insuficiencia cardíaca, IVERMECTINA


renales, discracias sanguíneas, embarazo, prematu­ hepática o renal y embarazo.
Indicaciones. Malari_a,toxoplasmosis. ros y recién nacidos. Indicaciones. Nematodos (oncocercosis,estron­
ESPIRAMICINA giloidosis) y artrópodos (insectos, garrapatas, áca­
Mecanismo de acción. Actúa sobre la subunidad DmTILCARBAMAZINA ·ros).
50S de los ribosomas y suprime la síntesis proteica. Indicaciones. Toxoplasmosis y criptosporidio­
Indicaciones. Filariosis. sis. Mecanismo de acción. Parálisis de la muscula­
. Posología. 900-2.400mg x 5-28 días. tura por su acción agonísta con el GABA. En
Mecanismo de acción. Se desconoce. Mecanismo de acción. Inhibición de la síntesis Onchocerca volvulus tiene una acción supresora de
Efectos adversos. Diarreas y posibilidad de des­ proteica al c01npetir por el sitio de unión de la la reproducción y menor postura de microfilarias
encadenar una colitis pseudomembranosa o colitis Posología. º
! 'día 50mg unidad 50 S de los ribosomas. viables, y no exacerba las lesiones oculares.
por antibióticos, rash cutáneo. 2do día 150mg
3" día 300mg Posología. 2.000-4.000 mg x 3-4 semanas. Posología. Oncocercosis: O, 15-0,2 mg/kg peso x
Contraindicaciones. Si provoca diarrea, dis­ 410.2omo 6 mg l día cada 6 a 12 meses
continuar su uso de inmediato. Efectos adversos. Buena tolerancia. Ocasional- Estrongiloidosis: 150-200 mg x !vez
Efectos adversos. Son muy frecuentes debido a 1):lente provoca intolerancia digestiva (náuseas, vó­
CLOROQUINA (FOSFATO, CLORHIDRATO) su acción filaricida (prurito,edema, exantema, fiebre, mito y diarrea) y, rara vez, reacciones alérgicas y Efectos adversos. Buena tolerancia, efectos la­
adenopatías) y por acción directa (trastornos colitis pseudomembranosa. terales leves y pasajeros: prurito leve,lifoadenopa­
Indicaciones. Malaria, absceso hepático amibiano gastrointestinales, artralgias). tías, mareos e hipertensión arterial.
(AHA). Contraindicaciones. No tiene. Usar con pre­
Contraindicaciones. No tiene. caución en el primer trimestre del embarazo. Contraindicaciones. El embarazo por acción
Mecanismo de acción. Bloquea la síntesis de teratogénica si se emplea en dosis elevadas en rato­
ácidos nucleicos, por su interacción con el ADN e DIYODOHIDROXIQUINOLINA ESTIBOGLUCONATO DE SODIO (PENTOSTAM®) nes.
inhibe la ADN y ANR polimerasas.
Indicaciones. Amibiasis crónica. Indicaciones. Leishmaniosis. MEBENDAZOL Y OTROS BENZOIMIDAZÓLICOS
Posología. Malaria: 250 mg base/kg en 48 horas. (flubendazol, etc.)
AHA: 500 mg/día x 4-1O semanas Mecanismo de acción. Se desconoce. Mecanismo de acción. Bloquea la glicólisis y la
formación de ATP al reducir la producción de ácido Indicaciones. Ascariasis, tricocefalosis, anqui­
Efectos adversos. Ocasionalmente provoca tras­ Posología. 1800 mg x 20 días. láctico por inhibición de la enzima fosfofructo­ lostomosis, enterobiosis, triquinosis, hidatidosis,
tornos gastrointestínales, cefalea, prurito y daño quinasa. angiostrongilosis abdominal.
visual. Rara vez se describe erupción cutánea, alope­ Efectos adversos. Posee una baja toxicidad. Pro­
cia y discrasias sanguíneas. Usada en altas dosis, voca leves trastornos gastrointestínales, rash, acné, Posología. 600 mg x 6-10 días im o iv. Mecanismo de acción. Inhibe en forma irrever­
ocasiona retinopatía irreversible. aumento de tamaño de la tiroides y ocasionalmente, sible la captación de glucosa, c<;in lo cual disminuye
prurito anal. A dosis elevadas, puede producir efec­ Efectos adversos. Son comunes e importantes. la síntesis de ATP.
Contraindicaciones. Daño hepático y enferme­ to tóxico en SNC y neuritis óptica. Tos, vómitos, cefalea, disnea, edema facial, dolor
dades graves de distíntos sistemas. abdominal, urticaria, hipotensión brusca, shock, Posología.
Contraindicaciones. Daño hepático e íntoleran­ alteraciones del ECG y daño hepático. Mebendazol: enterobiosis 200 mg x 1 día y re­
COTRIMOXAZOL cia al yodo. petir a las 2 sema­
(frimetoprirn-Sulfametoxazol) Contraindicaciones. Enfermedad cardíaca, he­ nas
EMETINA CLORIIIDRATO Y DEHIDROEMETINA pática o renal. Ascariasis y anquilostomosis 200 mg x 3 días
Indicaciones. Neumocistosis, isosporosis y ci­ Triquinosis 300 mg x 3 días y
closporosis. Indicaciones. Amibiasis, balantidosis y fas­ FURAZOLIDONA 500 mg x 10 días
ciolosis Hidatidosis 600-1800 mg X 30
Mecanismo de acción. El trirnetoprim inhibe la Indicaciones. Giardiasis. días
tetrahidrofolato reductasa que convierte el ácido Mecanismo de acción. Impide la síntesis de pro­
dihidrofólico en tetrahidrofólico y las sulfamidas teínas al inhibir la translocación del IARN. Mecanismo de acción. Probablemente por ac­ Efectos adversos. Se absorbe escasamente y casi
inhiben en forma competitiva al PABA, precursor de ción específica sobre los ribosomas. no provoca efectos secundarios, salvo a veces dolor
ácido fálico. Posología. Emetína l mg/kgx 5 días (subcutáneo) abdominal y diarrea. Raro: leucopenia.
y dehidroemetína 1,0-1,5 mg/kg x 5 días. Posología. 400 mg x 7 días.
Posología. Trimetoprim ( 20 mg/kg) x sulfame­ Contraindicaciones. Embarazo; por acción
toxazol (100 mg/kg) x 14 días. Efectos adversos. Es común la reacción local en Efectos adversos. Anorexia, náuseas y vómitos. teratogénica en ratas.
el sitio de inyección (celulitis). Son frecuentes los Más raro, reacciones alérgicas, polineuritis, hipo­
Efectos adversos. a) trimetoprim: náuseas y vómi­ efectos tóxicos sobre el tubo digestivo (diarrea, glicemia y anemia hemolítica. MEFLOQUINA
tos; b) sulfametoxazol: fiebre, rash, fotosensibilidad, náuseas, vómitos), corazón (taquicardia, dolor pre­
y anemia, leucopenia, trombopenia. cordial,hipotensión, alteraciones ECG) y musculatu­ Contraindicaciones. No usar con inhibidores Indicaciones. Malaria por P/asmodium falcipa­
ra esquelética (dolor, debilidad, rigidez, temblor).. · de la MAO. rum multirresistente.
588 PARASITOLOGIA MEDICA TR.4 TAMIENTO DE LAS PARASlTOSlS l'TABLAS TERAPEUTlCAS 589

Mecanismo de acción. Desconocido. Se com­ colitis pseudomembranosa, gusto metálico), neuro­ lestias digestivas, somnolencia, cefalea, vértigo, rash, Efectos adversos. Ocasionalmente produce mo­
porta como la quinina, pero no se intercala con el lógicos (vértigo, parestesias, ataxia, encefalopatías), alteraciones el ECG y de enzimas hepáticas. Raro: lestias gastrointestinales, cefalea, mareos, debili­
ADN. neutropenia. Efecto similar al disulfiram al ingerir convulsiones. dad, rash y fiebre.
alcohol.
Posología. Curativo: adultos l .000-l .500mg base Contraindicaciones. Epilepsia. Contraindicaciones. Embarazo y daño hepáti­
niños 25 mg/kg base Contraindicaciones. Enfennedades del SNC y co.
Profilaxis: adultos 250 mg base x 4 discracias sanguíneas. En embarazadas se podría PAROMOMICINA
semanas y luego, usar por pocos días (tricomonosis). Es carcinógeno PIRIMETAMINA
I 25 mg base sema­ en ratas y ratones y mutágeno en bacterias. Indicaciones. Amibiasis, balantidiosis, criptos-
nal. poridiosis. Indicaciones. Toxoplasmosis, malaria.
NICLOSAMIDA
Efectos adversos. Buena tolerancia. A dosis Mecanismo de acción. Inhibe la síntesis protei­ Mecanismo de acción. Inhibe la tetrahidrofolato
. elevadas, molestias gastrointestinales y nerviosas, Indicaciones. Cestodosis intestinales. ca como todos los aminoglicósidos, al impedir la reductasa que convierte el ácido dehidrofólico en
bradicardia. función de la unidad 30 S de los ribosomas. tetrahidrofólico, siendo mayor su afinidad por la
Mecanismo de acción. Es inhibidor de la fos­ enzima del parásito que por la enzima de la célula
Contraindicaciones . No usar en pacientes tra­ forilación oxidativa a nivel mitocondrial, llevando a Posología. hospedadora. Tiene acción sinérgica con las sulfa­
tados con betabloqueadores o quinidina, ni en em­ la muerte al parásito que es digerido por enzimas Amibiasis y balantidiosis: 1.500 mg (niños 15 midas (que inl1iben la dihidroxipteroil sintetasa).
barazadas. proteolíticas del hospedero. mg/kg peso) x 5-7 días. Estas enzimas regulan etapas sucesivas del metabo­
Criptosporidiosis: 2.000 mg x 4 semanas y lue­ lismo del ácido fólico del parásito.
MEGLUMINE (GLUCANTIME®) Posología. 200 mg en dos veces (V gr. 8 AM y go 1.000 mg como dosis de mantención.
9 AM) por l día (para teniasis, difilobotriosis y Presentaciones.
Indicaciones. Leishmaniosis dipilidiosis) y por 7 días (para himenolepiosis) Efectos adversos. Frecuentes molestias digesti­ - Daroprim® (pirimetamina 25 mg):
vas, especialmente diarrea. Raro: daño nefrotóxico toxoplasmosis y malaria (asociado a sulfami-
Mecanismo de acción. Es un compuesto anti­ Efectos adversos. Es inocua y rara vez provoca y ototóxico. das).
monial con acción similar a estibogluconato de sodio. algún trastorno gastrointestinal. No se absorbe por -Fansidar® (pirimetamina 25 mg + sulfadoxina
bloquea la glicólisis y la formación de ATP, al re­ el tubo digestivo. Contraindicaciones. No se describen. 500 mg):
ducir la producción de ácido láctico por inhibición tratamiento y profilaxis de la malaria, neumo­
de la enzima fosfofructoquinasa. NIFURTIMOX PENTAMIDINA ISOTIANATO cistosis, encefalitis toxoplásmica.
-Maloprim® (pirimetamina 12,5 mg + dapsona
Posología. 60-100 mg/kg peso cada 2 ó 3 sema­ Indicaciones. Enfermedad de Chagas. Indicaciones. Leishmaniosis visceral, neumocis­ 100 mg):
nas hasta completar 20 inyecciones im o iv. tosis, tripanosomosis africana, meningoencefalitis malaria
Mecanismo de acción. Actúa sobre la síntesis amibiana primaria. -Daraclor® (pirimetamina 15 mg + cloroquina
Efectos adversos. Son frecuentes e importan­ de ácidos nucleicos a través de metabolitos activa­ 205 mg):
tes: tos, vómitos, cefalea, disnea, edema facial, do­ dos (radicales libres). Mecanismo de acción. Bloquea la síntesis de malaria
lor abdominal, urticaria, hipotensión brusca, shock, ácidos nucleicos al ligarse al ADN.
alteraciones al ECG y daño hepático. Posología. IO mg/kg peso por 2-3 meses. Posología. Toxoplasmosis y malaria (ver Tablas
Posología. 200 mg (niños 2-4 mg/kilo de peso) Terapéuticas)
Contraindicaciones. Enfermedad cardíaca, he­ Efectos adversos. Son muy frecuentes y a veces x 15 días im
pática o renal. es necesario interrumpir la terapia. Los síntomas Efectos adversos. Ocasionalmente, discracias
son digestivos (anorexia, vómitos) y neurológicos Efectos adversos. Usualmente produce hipo­ sanguíneas (es necesario el uso simultáneo de ácido
METRONIDAZOL (temblor, parestesia, somnolencia, polineuritis y con­ tensión, vómitos, cefalea, vértigo, hipoglicemia y fólico). Raro: rash, yómitos, convulsiones y shock.
vulsiones). El uso de fenobarbital es útil para con­ discrasias sanguíneas. Es nefro, hepato y neuro­
Indicaciones. Amibiasis, giardiasis, balantidio­ trolar los efectos sobre el SNC. tóxico. Contraindicaciones. Primera mitad del emba­
sis y tricomonosis. razo. Usar con precaución en la segunda mitad del
Contraindicaciones. Absolutas no tiene. Contraindicaciones. Diabetes mellitus. embarazo.
Mecanismo de acción. Efecto tóxico mediado
por compuestos reducidos que inhiben la síntesis de ÜXAMNIQUINA PIRANTEL PAMOA TO PRAZICUANTEL
ADN.
Indicaciones. Esquistosomosis. Indicaciones. Ascaríasis, enterobiosis, anquilos­ Indicaciones. Cestodosis, esquistosomosis, neu­
Posología. Amibiasis aguda: 2000 mg (niños tomosis. rocisticercosis, paragonimosis y otras trématodosis.
30-50 mg/kilo) x 7-1O días. Mecanismos de acción. Actúa sobre el sistema
Amibiasis crónica, giardiasis, balantidiosis y trico­ neuromuscular. Mecanismo de acción. Provoca parálisis espás­ Mecanismo de acción. Aumenta la pem1eabili­
monosis: 750 mg (niños 15-20 mg/kilo) x 7-10 días tica por acción depolarizante y bloqueo neuromus­ dad de la membrana de la célula muscular al calcio,
Posología. 900 mg (niños 15 mg/kg) x I día. cular. lo que conduce a contracción masiva y parálisis
Efectos adversos. Rara vez son intensos. Sínto­ Posología. 750 mg (niños IO mg/kilo peso) x 1 espástica. Además, provoca desintegración del te­
mas gastrointestinales (náuseas, vómitos, diarrea, Efectos adversos. Ocasionalmente provoca mo- día. gumento de los platelmintos.
590

Posología:
PARASITOLOGIA MEDICA

Efectos adversos. Pueden ser derivados de reac­


1 TRATAMIENTO DE LAS PARAS/TOSIS Y TABLAS TERAPEUTIC.4S

más, inhibe el desarrollo de huevos y larvas de Giardiasis, tricomonosis: 2.000 mg (niños 50


59]

Esquistosomosis: 40 mg/ldlo de peso en l ciones de hipersensibilidad como el rubor, prurito, varios nematodos. mg/kg peso) x 1 día.
dosis ó 20 mg/ldlo x 3 fiebre, disnea, hemoglobinuria o por manifestacio­
veces x 1 día. nes de toxicidad, apareciendo un síndrome compues­ Posología. 1.500 mg (niños 50 mg/ldlo peso) x Efectos adversos. Bien tolerado, náuseas vó­
Neurocisticercosis: 50 mg/lcg de peso+ pred­ to por transtornos del oído, visuales, digestivos, 2 días. mitos, leucopenia transitoria. Efecto similar �l di­
nisona 1 mg/ldlo de peso nerviosos, cardíacos y cutáneos. Hipotensión seve­ sulfiram al ingerir alcohol.
x 14 días ra cuando es administrado en forma rápida. Efectos adversos. Son variados y comunes,
Paragonimosis y Agranulocitosis y anemia hemolítica. aunque transitorios. Entre los más comunes están Contraindicaciones. Embarazo, lactancia y aler­
otras trematodosis: 25 mg/ldlo de peso x 1-2 las náuseas, vómitos y vértigo. Ocasionalmente, da gia a imidazoles.
días. Contraindicaciones. Embarazo. leucopenia, hematuria y cristaluria, síntomas de
Teniasis y difilobotriosis: 10-20 mg/ldlo de peso x 1 hipersensibilidad, parestesias y trastornos visuales. TRICLABENDAZOL
día. SULFAMIDAS
Himenolepiosis: 25 mg/lcg de peso x 1 día Contraindicaciones. Daño renal o hepático. Indicaciones. Fasciolosis.
Indicaciones. Acción sinérgica con pirimetamina
Efectos adversos. En general, es bien tolerada. en el tratamiento de la toxoplasmosis. TINIDAZOL Mecanismos de acción. Desconocido. Al pene­
Ocasionalmente puede dar dolor abdominal, fiebre, trar el tegumento del parásito, disminuye su movi­
cefalea, vértigo, sudoración, somnolencia, urticaria y Modo de acción. Inhibe en forma competitiva al Indicaciones. Amibiasis, giardiasis y tricomo­ lidad, probablemente por afectar su sistema neuro­
eosinofilia. Se debe tener cuidado en pacientes dia­ PABA, precursor de la síntesis del ácido fólico. nosis. muscular.
béticos por una acción hiperglicemiante a dosis al­
tas. Posología. Sulfadiazina. 2.000-4.000 mg(niños 100 Mecanismo de acción. Se debería a su acción Posología. 10 mg/lcg por 1-2 días.
mg/ldlo peso x 3-4 semanas). sobre los ribosomas.
Contraindicaciones. No tiene. Efectos adversos. Buena tolerancia, escasos
Efectos adversos. Reacciones alérgicas y tóxicas Posología. efectos secundarios.
PRIMAQUINA FOSFATO a nivel de la piel y de las mucosas, que varían desde Amibiasis:. 2.000 mg (niños 50-75 mg/kilo peso)
lesiones leves a alteraciones graves (síndrome de x 2-3 días (en la disentería amibiana) y x 5 días en Contraindicaciones. No ·se describen.
Indicaciones. Malaria (prevención de recaídas). Stevens-Johnson). absceso hepático amibiano.

Mecanismo de acción. Afecta el metabolismo Contraindicaciones. No usar en prematuros ni


energético, a través de una biotransformación hacia recién nacidos (kemícterus). Hipersensibilidad a
intermediarios quinolinquinona, que bloquean el sulfas y daño renal.
transporte electrónico.
TETRACICLINA
Posología. 15 mg base(26,3 mg) ó 45 mg base(78
mg) (niños. 0,3 mg base) x 14 días. Indicaciones. Balantidíosis, disentería arnibiana.

Efectos adversos. Puede producir intolerancia Mecanismo de acción. Inhibe la fosforilación


digestiva, cianosis (metahemoglobinemia), anemia oxidativa y la síntesis proteica, por impedir la unión
hemolítica en déficit de G-6 PD, neutropenia. Son del tARN a la unidad 30 S de los ribosomas.
raros. síntomas del SNC y cardíacos.
Posología. 2000 mg x 1O días.
Contraindicaciones. Artritis reumatoide y lupus.
Efectos adversos. Los más comunes son efectos
QUININA por acción tóxica a nivel gastrointestinal (náuseas,
vómitos y diarrea). Menos frecuente, toxicidad hepá­
Indicaciones. Malaria (crisis severas). tica, renal o del octavo par craneano.
Mecanismo de acción. Es incierto el mecanismo Contraindicaciones. Embarazo y menores de ocho
exacto de su acción antimalárica. Al igual que la años, por depósito en huesos y dientes.
cloroquina, se une al ADN de doble cadena,
inhibiendo la síntesis de proteínas (afecta la replica­ TIABENDAZOL
ción de ADN).
Indicaciones. Estrongiloidosis, larvas migrantes
Posología. 1.200 mg (niños 25 mg/ldlo de peso) y triquinosis.
en dos dosis. iv lento (30-60 minutos) y luego pasar -,
a terapia oral. Mecanismos de acción. Bloquearía la capta­
ción de glucosa, al igual que el mebendazol. Ade-
, ., ·-· ,-.

592 PdRAS!TOLOGIA MEDICA TRATdMIENTO DE ldS PARAS/TOSIS Y TABLAS TERAPEUTICAS 593

TABLAS TERAPEUTICAS Drogas


Dosis diaria
Adultos Niños Ritmo de administración Presentaciones
(kglpeso) diaria principales
Dosis diaria
Drogas Adultos NiJios Ritmo de administración Ciclosporosis
Presentaciones
(kg/peso) diaria Cotrimoxazol:
principales 20 mg/kg 20mg 2veces x 5 dias (Ya citado)
Trimetoprim
I. ENTEROPARASITOSIS más
Sulfametoxazof. 100 mg/kg 100mg
Amibiasis aguda
Metronidazol 2.000mg 30-50mg 3veces x lO días Sarcocistosis
T: 250mg y 500mg
Tratamiento sintomático
Susp: 125 mg/5 mL
Amp: 500mg
Tinidazol 2.000mg 50-75 mg 1vez x 2-3 dias Blastocistosis
T: 500mg y l g 3veces x 7 días (Ya citado)
Metronidazol 1.500mg 30-50mg/kg
Susp: 1 g/5 mL
Emetina lmg/kg l mg 1-2inyec . x 5 días Amp: 20mg/mL
(máx . 60 mg) im o se profunda Ascariasis
40mg/mL 2veces x 3 días T: 100mg
Dehidroemetina 1,0-1,5 mg/kg 1,0-1,5 mg Mebendazol 200 mg 200 mg dt
1 inyec. x 5-10 días im
Susp: 100 mg/5 mL
Amibiasis crónica Albendazol 400mg 400mg dt 2 veces x l día T: 200mg
Metranidazol 750mg Susp: 200mg/5 mL
30-50mg 3veces x JO días (Ya citado)
Tinidazol 2.000 mg Pirantel pamoato 750 mg 10mg 1 vez x 1 día T: 250mg
50-75mg 1vez x 2días (Ya citado)
Alternalil'os: (máx . 1 g) Susp: 250mg/5mL
Diyodohidroxiquinoleína 1.800 mg 30-40mg 3veces ic 20 días T . 200 mg .¡
1
Paromomicina 1.500 mg 25-30mg 3veces x 5-7días Tricocefalosis
Caps . 250 mg 2veces x 3 días (Ya citado)
Mebendazol 200mg 200mg dt
Balantidiosis !.
Tetraciclina 2.000 mg no usar 4 veces x 1O días ·'. Anquilostomosis
Caps . 250 mg 1vez x día (Ya citado)
Paromomicina 1.500 mg 25 mg Pirantel pamoato 750mg 10mg
3-4veces x 5 días (Ya citado)
Metronidazol 2.000 mg 30-50mg (máx .! g)
3veces x 7días (Ya citado)
Oxantel/pirantel 750mg 10-20mg l vez x 3días T: 100mg
Giardiasis Susp:250mg/5mL
Metronídazol
Tinidazol
750mg
2.000 mg
15 mg
50-75 mg
3veces x 5-7 días
l dosis x l día
(Ya citado)
(Ya citado)
1� Mebendazol
Albendazol
200mg
400mg
200mg dt
200mg dt
2veces x 3 días
2veces x 3 días
(Ya citado)
(Ya citado)
Furazolidona j Flubendazol 300mg 300mg dt 1vez x 2 días T: 100mg
400mg 5-7mg 3-4veces x 7días T . 100mg Susp: 100mg/5mL
Susp: 50mg/5 mL "}
Alternativos:
,,f¡ Tiabendazol 1.500mg 50mg 2veces x 2 días T: 500mg
Isosporosis
En inmunocompetentes: Susp: 625mg/5mL
Tratamiento sintomático Hidroxinaftoato de Befenío 5.000 2.500 mg dt 1 vez x 3 días Bolsitas 5 g
En i11m1111ocomprometidas:
Cotrimoxazo1: Estrongiloidosis
Trimetoprím lvermectína 0,1-0,2 mg/kg 0,1-0,2 mg/kg 1vez x 1-2 días
20mg/kg 20mg 2veces x 14 días T . 80 mg trímet
más Tiabendazol 1500mg 50mg 2veces x 2días (Ya citado)
400 mg sulf. (máx . 3 g)
Sulfametoxazol 100 mg/kg 100mg Susp: 40mg trimet .
200 mg sulf.
Enterobiosis
Criptosporidiosis Mebendazol 200mg 200mg dt lvez x l día (Ya citado)
En inmunocompetentes: il Albendazol
Pirantel pamoato
400mg
750mg
400mg dt
10mg
l vez x ldia
1 vez x I día
(Ya Gitado).
(Ya citado)
Tratamiento sintomático ¡¡
En inmunocomprometidos: ,ü
Paromomicína 2.000 mg 2veces x 4 semanas Caps . 500 mg 'I Teniasis so/i11111 y saghrata
Prazicuantel 600mg 10mg 1vez x l día T: 150mg
(dosis de ataque)
"!t

J
Paromomicina Niclosamida 2.000 mg dt l.000-1.500 mg 2veces x I día T: 500mg
l.000 mg 2 veces x varias semanas ri
(dosis de mantención) (8AMy9AM)

T = tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Caps = cápsulas; im = intramuscular; se = subcutánea.


.
dt: dosis total.
T= tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Caps = cápsulas; im = intramuscular; se = subcutñnea.
.
594 PARASJTOLOGIA MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARASITOS/S l' TABLAS TERAPEUTICAS
595

Dosis diaria Dosis diaria


Drogas Adultos Nilios Ritmo de administración Prese11taciones Drogas Adultos Nhios Ritmo de admi11istración Presentaciones
(kg/peso) diaria principales (kg/peso) diaria principales

Difilobotriosis
c) Crisis sei•eras:
Prazicuantel 600-800 mg Quinina diclorhidrato 1.200 mg 25 mg 2 veces al día con inter­ (Ya citado)
25 mg/kg l vez x l día (Ya citado)
Niclosamida (máx.. 1.800 mg) valo de 6 a 8 h iv lento
2.000 mg 1.000-1.500 mg dt 2 veces x l día
(60 min) si tiene terapia
(8 AM y 9 AM)
Hymenolepiosis y dipilidiosis
oral no puede iniciarse.
Prazicuantel 1.500 mg 20-25 mg l vez x l dia (Ya citado)
Leisltmaniosis
Estibogluconato 600 mg 10 mg l ve_z x 6-10 días im o iv Amp: l:!Omg
II. HISTO Y HEMOPARASITOSIS
de sodio (Pentostam®) (máx. 600 mg)
Meglumine 60-l 00 mg/kg 60-100 mg l vez cada 2 ó 3 semanas
Malaria antimoniato (Glicantime®) hasta completar 10 a 20
inyecciones im o iv
l. Profilaxis o terapia s11presiva en áreas endémicas:
Cloroquina fosfato 300 mg base 5 mg base Anfotericina B 25-50 mg 0,25-1 mg 1 vez diaria o cada 2 días
l vez a la semana T: 250 mg
(500 mg) (< 50 kg) empezando I semana antes x 8 semanas iv infusión Amp:50 mg
(150 mg base)
y continuando por 4 se­ T: 500 mg lenta en S. glucosado al 5%.
manas después de la úl­ Pentamidina isotianato 200 mg 2-4 mg l vez x 15 días im Amp:200 mg
(300 mg base)
tima exposición.
Mefloquina Enfermedad de Cltagas
250 mg Igual esquema
Doxaciclina 100 mg Igual esquema Caps. 100 mg Nifurtimox 10 mg/kg 15 mg 3-4 veces x 2-3 meses T: 30-120 mg
2. Crisis palúdicas: Benzanidazol 600 mg 10 mg 2 veces x 30 días T: 250 mg
Cloroquina fosfato 600 mg base 10 mg base (Ya citado)
Toxoplasmosis
( 1g) dosis de (dosis carga)
carga, 300 mg entonces 5 mg l . Aguda:
base (500 mg) base a las 6 h. Pirimetamina 25-50 mg 1 mg l semana: 50 mg ( l mg/k) T: 25 mg
en 2 veces,
a las 6 h, luego y luego
300 mg base 5 mg base l vez x 2 días czdo y 3" día) 3 a 4 semanas: 25 mg (1 mg/k)
(500 mg) más 1 vez al día
3. Crisis palúdicas severas: Sulfadiazina 2.000-3.000 mg 100 mg 4 veces x 3-4 semanas T: 250-500 mg
Quinina diclorhidrato 1.200 mg 25 mg 2 veces x día con inter­ Amp:2mL Susp:500 mg
(máx 1800 mg) valo de 6 a 8 hrs iv lento 300 mg/mL Alternativo:
(30-60 min.) mientras no Espiramicina 2-4 g 50-100 mg 2 veces x 3-4 semanas T: 500 mg
pueda iniciarse terapia oral
Cloroquina 200 mg base No se reco­ Cada 6 h im Amp:5 mL 2. Ocular:
clorhidrato (250 mg) mienda 50 mg (40 mg Igual esquema que en la forma aguda+ corticoterapia
base) mL Alternativo:
4. Prevención de recaídas (P. viva., y P. ovale): Clindamicina 2.400 mg 10-30 mg 2 veces x 21-28 días Caps:150-300 mg
Primaquina fosfato 15 mg base 0,3 mg base l vez x 14 días T: 26,3 mg (sola o en combinación con sulfas y corticoterapia)
(26,3 mg) o (15 mg base)
45 mg base l vez a la semana x 3. Embarazadas:
(79 mg) 8 semanas - Primeras 16 semanas
5. Cepas de P. Jalcipar11111 resistentes a c/aroq11ina: Espiramicina 2.000-3.000 mg 2 veces al día
a) Profila.ris o s11presión: - Desde las 16 semanas
Pirimetamina más 25 mg Pirimetamina 25 mg curas de 2 semanas y (Ya citado)
6-11 mes:l/8t l vez x semana desde l día T: 25 mg pirimet.
Sulfadoxina (Fansidar<lil) 500 mg 1-3 años • t antes hasta 6 semanas descanso de 21-28 días
500 mg sulfad.
y continuar o alternar
4-8 años • t después de la exposición
más con espiramicina.
9-14 años / t
b) Crisis paliídicas: Sulfadiazina 2.000 mg (Ya citado)
Quinina sulfato 1.800 mg 25 mg 3 veces x 3 dias T:120, 200 y 300 mg
(máx. 2g)
Doxiciclina 100 mg l vez x 7 días (Ya citado)
Clindamicina 900 mg 3 veces x 5 días Caps: 350 mg T= tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = nmpollas; Caps = cápsulas; im = intramuscular, se = subcutánea.

T = tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Caps = cápsulas; im = intramuscular; se.,",, subcutánea.
r··
·r

596 PARASITOLOG!A MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARASITOSIS Y TABLAS TERAPEUTICAS 597

Dosis diaria Dosis diaria


Drogas Adultos Nhios Ritmo de administración Presentaciones .Drogas Adultos Nilios Ritmo de administración Presentaciones
(kg/peso) diaria principales (kglpeso) diaria principales

4. Congénita: Amibas de vida libre


RN sintomático: Anfotericina B 25-50mg l mg 1 vez hasta x 8 semanas iv (Ya citado)
Pirimetamina 0,5 - 1mg (Ya citado) más
más Sulfadiazina 2.000mg 50-100mg 4 veces hasta x 8 (Ya citado)
Sulfadiazina 50-100mg 2 veces x 21 dios (Ya citado) semanas
Alternado con: Alternativos:
Espiramicina 50-100mg 2 veces x 30-45 dias (Ya citado) Pentamidina isotianato 200mg 2-4mg 1 vez x 14días im (Ya citado)
(Este esquema se repetirá 3-4 veces durante el primer año de vida). ó
RN asintomático: Pirimetamina 1mg/kg 1 mg 2 veces x 14 días (Ya citado)
- Primeros 2 meses de Pida: más ( 50 mg)
Espiramicina 1.000mg 2 veces al día (Ya citado) Sulfadiazina 2.000 mg 50-100mg 4 veces x 14 dias (Ya citado)
- A partir del tercer mes:
Pirimetamina 0,5 - 1 mg cada dos, tres o cuatro
días x 21 días, descanso,
(Ya citado)

1
Microsporidiosis
Encephalitozoon intestina/is: l
continuar hasta negativiza - Albendazol 400mg 400 mg dt 2 veces x 4 semanas (Ya citado)
más ción de la serología . Encephalitozoon hellem:
Sulfas 50 - 100mg (Ya citado) Fumagilina Tópica 1-2veces x 1-2 semanas
5. Inmunocomprometidos:
- I" día: Filariosis :¡;'!,
Pirimetamina 100-200mg 1 mg 4 veces (Ya citado) Wuchereria 'bancrofii, Brugia ssp , Loa loa:
más Dietilcarbamazina 50mg 25-50mg dt 1 vez x !"día T: 50mg
Sulfadiazina 6.000-8.000mg 100mg 4 veces (Ya citado) 150mg 75-150mg dt 3 veces x 2do día
300mg 150-300mg dt 3 veces x 3" día
- por 4-6 semanas: 6mg/kg 6mg/kg 3 veces x 17 dias (Ya citado)
Pirimetamina 50-75mg 1mg 2-3 veces (Ya citado) Oncocercosis
más Ivennectina 0,2 mg/kg 0,2mg/l<g 1 vez x I día
Sulfadiazina 2.000-3.000 mg 100mg 4 veces (Ya citado)
Eosinofilia tropical
- Alternativo: Dietilcarbamazina 350mg 6mg 3veces x IO días (Ya citado)
· Pirimetamina 50mg 1 mg 2 veces (Ya citado)
más Triquinosis
Clindamicina 2.400mg 20-30mg 4 veces (Ya citado) Corticoides 60mg 1 mg l vez x 2-3 días T: 5 mg
(prednísona) de descenso progresivo
- Mantención: durante JO ó 15 dias
Pirimetamina 25mg 1mg Albendazol 400mg 200mg dt 2 veces x 7días (Ya citado)
más Tiabendazol 3.000 mg 50 mg 2 veces x 5 días (Ya citado)
Clindamícína 1.200mg 10-20mg Mebendazol 600-1.200 mg 3 veces x 3días (Ya citado)
y 1.200 y 1.500mg y 3 veces x 10días
Ncumocistosis
Cotrimoxazol: Angiostrongilosis abdominal
Trimetoprim 20mg/kg 20mg 2 veces x 14 días (Ya citado) Tratamiento quirúrgico .
más Alternativo:
Sulfametoxazol 100mg/kg 100mg Mebendazol 50-75mg/kg 50-75mg 2 veces x 2 semanas (Ya citado)
Pentamidina isotianato 200mg 4mg l vez x 12-14 días (Ya citado)
Larvas migrantcs
Tricomonosis Cutánea:
Metronidazol 750mg 15mg 3 veces x 7-10 días T: 250-500mg Tíabendazol 2.500-3.000mg 50mg 2 veces x 2-5 días (Ya citado)
óvulos vaginales . (máx . 3 g)
500mg Visceral:
Tínidazol 2.000mg 50mg l vez x l día (Ya citado) Albendazol 400mg 200 mg dt 2 veces x 7 días (Ya citado)
Tiabendazol 3.000mg 50mg 2 veces x 5 días (Ya citado)

T = tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Caps = cápsulas; im = intramuscular; se = subcutánea. dt = dosis total
T = tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Cnps = cápsulas; im = intramuscular; se = subcutáqea.
598 PARASITOLOGIA MEDICA TRATAMIENTO DE LAS PARA SITOSIS l' TABLAS TERrlPEUTICAS
599

[II. INFECCIONES Y ENFERMEDADES PROVOCADAS POR ARTRÓPODOS


Dosis diaria
Drogas Adultos Niños Ritmo de admi11istración Presentaciones
(kglpeso) diaria principales Droga Ritmo y modo de admi11istració11

Corticoides 30-40 mg 0,5 mg 1 vezx 2-3 días (Ya citado)


(prednisona) seguido de descanso Sarna
progresivo Loción de lindano o gamexano 1% Aplicación tópica 1 vez, en toda la superficie corporal,
Dietilcarbamazina 150 mg 2 mg 3 vecesx 1 mes (Ya citado) excepto la cara. Se puede repetir a los 7 días. Tratamiento
simultáneo de los contactos.
Hidatidosis Crotamitón Aplicación tópica.
Tratamiento quirúrgico Decametnna Aplicación tópica
Alternativo: Benzoato de benzilo Aplicación tópica
Albendazol 400 mg 200 mg dt 2 vecesx 28 días, (Ya citado) Vaselina azufrada Aplicación tópica
descanso de 15 días Pomada de tiabendazol 5% Aplicación tópica 1 vez x 5 días, a excepción de la cara.
y repetir varias veces
Mebendazol 1.200-1.800 30 mg 3 vecesx 21-30 días, (Ya citado) Pediculosis
descanso y repetir Loción o polvos de lindano gamexano 1% Aplicación tópica de las áreas corporales afectadas y/o
vmias veces. espolvoreo de las vestimentas. Repetir a los 7 días. Tra­
tamiento de los contactos.
Cisticercosis Loción o champú de carbarilo Tópicamente en cuero cabelludo.
Albendazol 400 mg 200 mg 15-21 días, descanso (Ya citado)
y repetir Latrodectismo
Prazicuantel 50 mg/kg 50 mg 3 vecesx 14 días, (Ya citado) Neostigmina 0,5mg im cada 8 ó 12 horas hasta remisión de sintoma­
más descanso y repetir tología aguda; o bien, 15 mg vía oral cada 8 horas, duran­
corticoides (prednisona) 1 mg/kg 1 mg te dos o tres días.

Esquistosomosis Loxoscelismo
Prazicuantel 1.800-2.400 mg 30-40 mg 1-2 vecesx I dia (Ya citado) Suero antiloxosceles 1 ampolla intramuscular dentro de las primeras horas del
Oxamniquina ·900 mg 15 mg 1 vezx 1 día T: 250 mg accidente.
Susp: 50 rng/rnL Cutáneo:
Antihistamínicos Iniciar con 1 O mg cloropropoxifeno o similar, im cada 8
Pnragonimosis a 12 horas x 3 ó 4 días. Seguir por vía oral en dosis
Prazicuantel 1.500 mg 25 mg 3 vecesx 1 día (Ya citado) decrecientes hasta remisión de lesiones.
Dapsona 50-200 mg durante 10 a 25 días.
Fasciolosis Sistémico:
Triclabendazol 10 mg/kg 1 vezx 1-2 dias Corticoides inyectables 200-400 mg diarios de lúdrocortisona: im o iv; según
Emetina 1 rng/kg 1 rng 1 vezx 7-10 días s c (Ya citado) urgencia del caso, hasta remisión de la hemoglobinuria.
Dehidroemetina 1,0-1,5 mg/kg 1 rng 1 inyecciónx 5 días im (Ya citado) Seguir con 40-60 mg diarios de prednisona, im, en dosis
decrecientes por 15 a 20 días.

Picadura de insectos
Antihistaminicos Locales, orales o inyectables, según la gravedad del cua­
dro.

T= tabletas; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Cnps = cápsulas; irn = intramusculn4 se = subcutánea. T= tabletns; Susp. = suspensión; Amp. = ampollas; Caps = cápsulas: im = intramuscular: se = subcutánea.
GLOSARIO

acantela. Segundo estado larval de acantocéfalo blefaroplasto. Es un centríolo del cual emerae el
que se forma entre el acantor y el cistacanto, y axonema. También se le conoce como kinefoso­
en el cual ya están desarrollados los órganos ma o cuerpo basal.
definitivos. bolsa copulatriz. Expansión en la extremidad pos­
acantor. Larva de acantocéfalo que emerge del terior de los machos de algunos nematodos.
huevo. Campana copulatriz.
acefaloquiste. Quiste hidatídico estéril, sin escóli­ bolsa del cirro. Organo que aloja al cirro de los
ces. platelmintos.
acetábulo. Ventosa ventral de los trematodos. Ven­ botrium. Surco longitudinal que sirve como ele­
tosa del escólex de los cestodos. mento de fijación en el escólex de cestodos
agamogonia. Esquizogonia. seudofilideos. Plural: botria.
amastigoto. Estado evolutivo en los tripanosomas, bradizoíto. Elemento que resulta de la multiplica­
el cual carece de un flagelo bien desarrollado. ción lenta, por endodiogenia, en los quistes de
ameboma. Formación granulomatosa derivada de Toxoplasma.
una úlcera amibiana y que contiene trofozoitos bulbo esofágico. Parte ensanchada del esófago de
activos. algunos nematodos, apto para la masticación.
amébula. Célula hija derivada de la mitosis de una
canal de Laurer. Canal que nace del receptáculo
amiba enquistada.
seminal y termina habitualmente en un fondo de
anapólisis, Desprendimiento de una proglótida se­
saco dorsal en los trematodos digenéticos, con­
nil después de haber eliminado sus huevos.
siderado como una vagina vestigial.
anfidio. Organo sensorial de los nematodos locali­
canal excretor. Conducto que une la célula en lla­
zados en la región cefálica.
ma con el poro excretor de los platelmintos.
anfistoma. Trematodo con la ventosa ventral o
canal ginecóforo. Surco longitudinal en la superfi­
acetábulo localizado en la extremidad posterior.
cie ventral de un esquistosoma macho y en el
anillo polar. Organelo de función desconocida,
cual se aloja la hembra durante la cópula.
localizado en la extremidad anterior de esporo­
zoitos y merozoitos. capítulo. Región anterior de ácaros y garrapatas.
antropozoonosis. Infección del hombre transmisi­ cápsula bucal. Cavidad bucal de algunos nemato­
ble a los animales. dos.
apolisis. Desprendimiento o desintegración de una cápsula ovígera. Bolsa sacciforme formada por el
proglótida grávida en los cestodos. útero de las proglótidas maduras de dipilídidos
arenilla hidatídica. Escólices y ganchitos libres y que contiene un número variable de huevos en
que constituyen el sedimento del líquido hidatí­ su interior.
dico. célula en llama; célula l:lamígera. Organo excre­
atrio genital. Cavidad que continúa al poro genital tor y termorregulador en cestodos y trematodos.
en los platelmintos y en la cual desembocan la Protonefridio.
vagina y la bolsa del cirro. cenuro. Forma larval en la familia Taeniidae, en la
autotrófico. Organismo capaz de sintetizar molé­ cual los escólices nacen por yemación de la capa
culas orgánicas a partir de sustancias inorgánicas. germinativa, sin que estén contenidos en un
axénico. Cultivo artificial de una sola especie de quiste interno.
microorganismo. cercaría. Estado juvenil en los trematodos digené­
axonema. Microtúbulos que forman la parte central ticos, producido por multiplicación asexuada
de cilio& y flagelos. dentro de un esporoquiste o de una redia.
axosoma. Región basal de flagelos y cilios, del cual cercómero. Porción posterior de un procercoide o
emerge el axonema. de un cisticercoide, que contiene los ganchitos
axostilo. Vástago elongado que recorre longitudi­ de la oncosfera.
nalmente el cuerpo de las tricomonas.
ciclo biológico; ciclo evolutivo; ciclo de vida. Eta­
bartonelosis; enfermedad de Carrión. Infección pas secuenciales del desarrollo de un parásito.
microbiana transmitida por flebótomos. Si existen fases sexuales, comprende desde el
biontófaga. Larva de mosca que se alimenta de cigoto hasta la generación de gametos, o desde
tejidos vivos. · el huevo hasta el estado adulto.
·,

602 PARAS!TOLOG!A MEDICA GLOSARJO


603

ciego. Fondos de saco terminal del intestino de los coprozoico. Organismo que vive en las heces o en ectoparásito. Parásito que vive en la superficie como pian bois, úlcera de los chicleros o uta.
trematodos. aguas contaminadas con heces. externa del hospedero. esquistosómula. Estado juvenil de Sclzistosoma
cigoto. Célula diploide que se forma por fusión coracidio. Larva ciliada que emerge del huevo, en elefantiasis. Linfangitis crónica en la filariosis por · generado entre la cercarla y el adulto.
completa (singamia) de los gametos masculinos algunos cestodos. Wuchereria bancrofti. esquizogonia. Multiplicación asexuada, por fisión
y femeninos. cordones. Espesamiento de la hipodermis de los embrióforo. Cubierta que rodea a la oncosfera de múltiple, con formación simultánea por cito­
cilio. Organelo corto que emerge del blefaroplasto. nematodos en los cuales se alojan los conductos los platelmintos. quinesis, de un número variable de células hijas.
cirro. Organo copulador en los platelmintos. nerviosos y canales excretores. endodiogenia. Forma de endopoliogenia, en la cual Agamogonia.
cistacanto. Tercer estado larval de los acantocéfa- costa. Organelo de soporte que se extiende a lo se forman dos células hijas. esquizonte. En la esquizogonia, estado de división
los y que es la forma infectante para el hospede­ largo de la membrana ondulante en las trico­ endoparásito. Parásito que vive en el interior del 11;últi�le ?el núcleo, sin que todavía haya
ro definitivo. monas. hospedero. c1toqumes1s y, por lo tanto, merozoitos libres.
cisticerco. Forma larvaria (metacestodo) en la fa­ criptozoito. Esquizonte preeritrocítico en P/asmo­ endopoliogenia. Forma de multiplicación asexua­ estadio. Etapa de desarrollo.
milia Taeniidae constituido por una vesícula lle­ dium spp. da, mediante la cual se forman células hijas esticocito. Célula rectangular con funciones se­
na de líquido que contiene un solo escólex inva­ crithidia. Antiguo nombre del epimastigoto. rodeadas por una membrana propia, en el inte­ cretoras que rodea al esófago de la mayoría de
ginado. ctenidio. Peine característico de la cabeza y porción rior de la célula madre. los nematodos de la Familia Trichuridae.
cisticercoide. Forma larval (metacestodo) formado anterior del tórax en las pulgas. endopterigoto. Insecto cuyas alas nacen a partir de esticosoma. Conjunto de esticocitos.
a partir de la oncosfera en algunos cestodos cuartana. Malaria con crisis febriles cada setenta y un proceso interno. Ocurre en los insectos estrategia K. Características utilizadas por algu­
ciclofilideos, con un escólex y una prolongación dos horas, provocada por el Plasmodiuµ1 mala­ holometabólicos (con "metamorfosis completa"). nas especies para sobrevivir: baja fecundidad,
como cola, el cercómero. riae. enfermedad de los vagabundos. Piel pigmentada y vida prolongada y densidad de las poblaciones
citopigio. Conducto que evacúa las vacuolas de cuello. Porción ubicada detrás del escólex en algu­ engrosada por la infestación por Pediculus dependientes de las condiciones del ambiente.
desecho en los ciliados. nos cestodos y a partir del cual se forman las lmmanus durante largo tiempo. estrategia R. Características utilizadas por algunas
citostoma. Boca rudimentaria en los ciliados. proglótidas. enfermedad del sueño. Tripanosomosis africana. especies para sobrevivir: alta fecundidad, alta
don. Línea celular derivada de una sola célula y, en cuerpo basal. Es un centríolo del cual emerge el epimastigoto. Etapa del ciclo evolutivo de los tJ.ipa­ mortalidad, vida corta y densidad de las pobla­
los protozoos, de un solo individuo. axonema. También se le conoce como ldneto­ nosornas en los cuales el kinetoplasto está loca­ ciones independientes de las condiciones del
coanomastigoto. Estado morfológico similar al sorna o blefaroplasto. lizado por delante del núcleo y presentan una ambiente.
promastigoto, pero en el cual el flagelo emerge cuerpo cromatoideo. Elemento de función desco­ corta membrana ondulante asociada al flagelo. estróbila. Conjunto de proglótidas de un cestodo.
de una abertura en collar, como en Crithidia nocida en quistes de amibas intestinales y que escólex. Organo de fijación o "cabeza" de un cestodo. exflagelación. Formación de gametos a partir del
spp. en preparaciones teñidas aparece como una es­ escudo. Pieza quitinosa que recubre dorsalrnente a microgarnetocito en Plasmodium y otros hemos­
colonia. Grupo de organismos unicelulares que vi­ tructura basófila y, al microscopio electrónico, los ixódidos. poridios.
ven en asociación, a menudo derivado de una corno una agrupación de ribosomas. esófago. Segmento del aparato digestivo que en los exoeritricítico. Estado del ciclo evolutivo de P/as­
sola célula. cuerpo de Stieda. Tapón localizado en uno de los nematodos une la cápsula bucal con el intestino modium y otros hernosporidios, en el cual la
comensalismo. Relación simbiótica en la cual una polos de los ooquistes de los coccidios. y, en los trematodos, se extiende desde la farin­ esquizogonia se produce en células que no son
especie, el comensal, vive a expensas de otra cutícula. Primera capa, sin núcleos, de naturaleza ge hasta la bifurcación de los ciegos. eritrocitos.
especie, el hospedero, sin ocasionarle ningún lipoproteica y colágena, de la pared externa de espargano. Plerocercoide de un cestodo cuyo esta­ exopterigoto. Insecto en el cual las alas nacen a
daño. los nematodos. Membrana externa, lisa y sin do adulto no está definitivamente identificado. partir de un proceso externo. Ocurre en los in­
comisura. Unión de cordones nerviosos en los ne­ núcleos, de la hidátide. esparganosis. Infección por esparganos. sectos hemirnetabólicos (con "metamorfosis in­
matodos. chagoma. Lesión de puerta de entrada del Trypano­ espícula. Organo par del aparato genital masculino completa").
complejo apical. Conjunto de organelos ultraes­ soma cruzi en la piel, de aspecto nodular. de nematodos, cuya función es abrir la vulva
tructurales propios del subphylum Apicomplexa durante la cópula. facultativo. Simbionte que se relaciona con un
constituido por anillos polares, roptríes, mi­ dengue. Infección viral transmitida por mosquitos. espo�oblasto. Masa celular que se diferenciará en hospedero cuando se presenta la oportunidad,
cronemas y conoide. desenquistamiento. Proceso mediante el cual los esporoquiste dentro de un ooquiste. sin que fisiológicamente esté obligado a ello.
condrioma. Es el mitocondrión de los tripanoso­ organismos enquistados se liberan de los quistes esporogonia. Esquizogonia o fisión múltiple de un faringe. Parte del aparato digestivo en los trernato­
mas. que los contienen. cigoto que dará origen a esporozoitos. dos, que une la ventosa oral y el esófago.
conducto deferente. Conducto que lleva la esper­ diapausa. Etapa inmóvil, con suspensión de algu­ esporonte. Masa celular indiferenciada dentro de fasmidio. Organo sensorial par localizado en la
ma dede los conductos eferentes hasta la bolsa nas funciones fisiológicas, que se observa en un ooquiste no esporulado y en la cual se produ­ extremidad posterior de algunos nematodos.
del cirro en los platelmintos. algunos artrópodos. cirá la esporogonia. fiebre amarilla. Enfermedad viral transmitida por
conducto eferente. Conducto que lleva la esperma digenético. Trernatodo cuyo ciclo evolutivo requie­ esporoplasma. Germen arniboideo contenido en la el mosquito Aedes aegypti.
desde los testículos hasta el conducto deferente re de huéspedes intermediarios. espora de un microsporidio y que es infectante fiebre de Oroya. Fase aguda febril de la bartonelo­
en los platelmintos. dióico. Sexos separados; por lo tanto, existen indi­ para el pró�imo huésped. sis, transmitida por flebótornos.
conjugación. Forma de reproducción sexuada en viduos que son machos o hembras. esporoquiste. Etapa de desarrollo de los protozoos fiebre pappatasi. Infección viral transmitida por
los ciliados, mediante la cual los individuos disco suctorio. Depresión ventral en Giardia, que que dará origen a esporozoitos. Etapa de desa­ flebótornos.
intercambian material genético de sus micro­ actúa corno órgano de fijación. rrollo en los trematodos digenéticos que se for­ filopodio. Seudopodio filamentoso que sirve para la
núcleos. distoma. Trematodo con dos ventosas: una oral y ma a partir del rniracidio o de otro esporoquiste. locomoción y para la captura de alimentos.
cono cefálico. Prominencia del extremo anterior de otra ventral. esporozoito. Cada una de las células hijas resultan­ foresis. Es una forma de simbiosis en la cual el
algunos trematodos. tes de la esporogonia. simbionte, el foronte, es llevado mecánicamente
conoide. Cono truncado de forma espiral, localiza­ ecdisis. Muda de la cutícula de un artrópodo, lo espundia. Leishmaniosis mucocutánea producida por su hospedero, sin que haya una dependencia
do dentro de los anillos polares del complejo cual le permite crecer antes que vuelva a secre­ por Leishmania braziliensis, también conocida necesaria entre ellos.
apical de los Apicomplexa. tar una nueva cutícula.
604 PARASITOLOGIA MEDICA GLOSARIO 605

flagelo. Organelo filiforme, más largo que un cilio, heteroxeno. Ciclo de vida de un parásito que debe Iobopodio. Seudopodio grueso y romo. monoxeno. Ciclo de vida de un parásito en un solo
que sirve en los protozoos para la locomoción y pasar por más de un hospedero. hospedero.
macrogameto. Gameto "femenino" grande y quie­
para la fijación. hexacanto. Larva con seis ganchitos que emerge de mosca tsetsé. Mosca hematófaga del género Glo­
los huevos de los eucestodos. También se llama to. ssina, vector de la enfermedad del sueño.
gametogonia. Diferenciación de garnetocitos o ga­ macrogametocito; macrogamonte. Célula que dará
oncosfera. mutualismo. Tipo de simbiosis en la cual se bene­
metos. origen a un macrogameto. fician recíprocamente hospedero y simbionte.
hidátide. Larva (metacestodo) del género Echino­
gametocito; gamonte. Célula a partir de la cual se membrana ondulante. Extensión o pliegue de la
coccus, de aspecto vesicular, llena de líquido y myiasis. Infección por larvas de moscas.
diferenciarán los gametos masculinos o femeni­ membrana que sostiene al flagelo en tripanoso­
de protoescólices.
nos en el ciclo evolutivo de los coccidios. mas y tricornonas. nagana. Infección del ganado por el Trypanosoma
biperparásito. Parásito de un parásito.
gamogonia. Unión de los gametos masculinos y merogonia. Esquizogonia de un esperozoito o de brucei bntcei y T. b. congolense.
bipodermis. Segunda capa, de aspecto sincicial, de
femeninos para formar el cigoto. un merozoito que dará origen a nuevos mero­ necrobiontófaga. Larva de mosca que se alimenta
la pared externa de los nematodos.
geohelminto. Helminto de ciclo directo o monoxé­ zoitos. de tejidos necrosados del hospedero.
bipostoma. Organo impar y medio del aparato bu­
nico cuyos huevos se desarrollan en la tierra. merozoito. Cada una de las células hijas que se ninfas. Estadios juveniles tanto de insectos con
cal de los ácaros, que les sirve para fijarlos al
genninativa; prolígera. Membrana sincicial, loca­ forman a partir de la esquizogonía de un espero­ metamorfosis incompleta (hemimetabólica)
sitio de alimentación.
lizada por debajo de la cutícula, y a partir de la zoito o de un merozoito progenitor (merontes). como de ácaros y garrapatas, con un número
homogónico. Ciclo evolutivo, en el cual todas las
cual se desarrollan todos los elementos de la mesonero. Ser vivo en el cual vive un parásito. completo de patas.
generaciones son de vida libre o parasitaria.
hidátide. También llamado hospedero o huésped.
hospedero. Ser vivo en el cual vive un parásito. oncocercoma. Nódulo subcutáneo formado por ovi­
ginandria. Maduración precoz de las gónadas fe­ metacercal'ia. En el ciclo evolutivo de los tremato­
También llamado huésped o mesonero. llos de ejemplares adultos de Onchocerca vol­
meninas con respecto de las gónadas masculi­ dos digenéticos, estado entre la cercarla y el
hospedero accidental. Huésped cincunstancial para vulus.
nas en un individuo hermafrodita. También se adulto, generalmente enquistado y quieto.
un parásito. oncosfera. Larva con seis ganchitos que emerge de
llama protoginia. metacestodo. Cada uno de los estadios del desarro­
hospedero definitivo. Hospedero en el cual el pa­ los huevos de los eucestodos. También se llama
glándulas de Mehlis. Glándulas unicelulares, mu­ llo larval de los cestodos, a partir de la oncosfe­
rásito alcanza su madurez sexual. hexacanto.
cosas o serosas, que rodean al ootipo de los ra.
hospedador intermediario. Hospedero en el cual oogenotopo. Conjunto del complejo genital femeni­
platelmintos. metacíclico. Etapa final del ciclo evolutivo de un
el parásito desarrolla parte de su ciclo evolutivo, no de los platelmintos, constituido por oviducto,
glándulas vitelógenas. Glándulas de los platelmin­ parásito· y que constituye la forma infectante
sin alcanzar su madurez sexual. ootipo, glándulas de Mehlis, conducto vitelino y
tos, encargadas de formar el vitelo y la cápsula para el próximo hospedero.
hospedero final. Huésped definitivo. útero.
del huevo. metamorfosis. Tipo de desarrollo en algunos Phyla
hospedador paraténico: hospedero transporta• ooquinete. Cigoto móvil de Plasmodium, formado
glicocálix. Capa muy fina de carbohidratos que se de animales, mediante el cual se forman esta­
dor. Hospedero que alberga un parásito, sin que en el intestino del mosquito.
encuentra en la superficie externa de muchas dios juveniles hasta alcanzar el estado adulto.
esté presente algún grado de desarrollo. ooqniste. Forma quística que contiene el cigoto
células. metamorfosis hemimetabólica. Metamorfosis gra­
huésped. Ser vivo en el cual vive un parásito. Tam- resultante de la esporogonía en los Apicomplexa
gránulos de Maurer. Gránulos eosinofílicos de dual en los insectos, en los cuales las ninfas son
bién llamado hospedador o mesonero. y los cuales pueden estar cubiertos por una en­
color rojo obscuro en el interior de eritrocitos de aspecto similar a los adultos y con sus mis­ voltura translúcida (lsospora) o estar desnudos
parasitados por el Plasmodíum falcíparum. infección parasitaria. Endoparásito que se alberga mos hábitos alimenticios.
gránulos de Shüffner. Granulaciones que se for­
(Plasmodium)
en el interior de un huésped. metamorfosis holometabólica. Metamorfosis com­
ooteca. Conjunto de huevos de cucarachas encerra­
man en eritrocitos parasitados por Plasmodium infestación parasitaria. Parásito que se alberga en pleta en un insecto con estados de larva, pupa y dos en un paquete quitinoso.
vivax. la superficie del huésped. Habitualmente corres­ adulto bien diferenciados. ootipo. Porción dilatada del conducto genital feme­
grataje. Lesión de la piel debido al rascado repeti­ ponde a ectoparásitos. microfilaria. Larva de filaria que habitualmente se
nino en los platelmintos, rodeado por las glán­
do, corno se observa en la pediculosis. inquilinismo. Asociación biológica en la cual el encuentra en la sangre o en los tejidos del hos­ dulas de Mehlis. Allí se reúnen óvulo, vitelo y
inquilino vive sobre o dentro de un huésped sin pedero definitivo. cáscara para formar el huevo.
halterio. Vestigios del segundo par de alas en los
alimentarse a sus expensas y sin provocarle daño. microgameto. Gameto "masculino", delgado y ac­
opérculo. Tapa de la envoltura de los huevos de
dípteros, necesario para mantener el equilibrio
durante el vuelo. tivo. algunos parásitos y por la cual escapa la larva.
Idnetoplasto. Parte extranuclear de ADN asociado
microgametocito. Célula que dará origen a micro­
halzoun. Enfermedad producida por el bloqueo de con el mitocondrión de los tripanosomas. opistomastigoto. Estado morfológico del orden Ki­
la nasofaringe por un parásito. gametos. netoplastida, en el cual el kinetoplasto es de
ldnetosoma. Es un centríolo del cual emerge el
micronemas. Cuerpos delgados y sinuosos del com­
helminto. Nombre genérico de los vermes parásitos axonema. También se le conoce corno blefaro­ localización posterior al núcleo y carece de mem­
plejo apical del subphylurn Apicomplexa que se brana ondulante. El flagelo recorre por un surco
y que abarca acantocéfalos, nematodos, cestodos plasto o cuerpo basal. abren junto a los roptríes en la parte anterior de
y trematodos. toda la extensión del cuerpo del parásito para
labro. Labio superior que cubre la boca de los artró­ un esporozoito o de un merozoito, probablemen­ emerger libre en el extremo anterior (He1peto­
hematófago. Parásito que se alimenta de sangre.
podos. te con funci_ones que les permiten penetrar a la
hemocele. Cavidad principal de los artrópodos. monas).
ladilla. Nombre vulgar del Phthirius pubis. célula hospedera. otoacarosis. Infestación del canal auditi'llo externo
hemolinfa. Líquido que llena el hernocele de los larva. Progenie en la evolución de los helmintos y micropila. Pequeña abertura en los ooquistes de los
atrópodos y la cavidad seudocelomática de los por ácaros o garrapatas
artrópodos, de aspecto muy diferente del estado coccidios, por la cual escapan los esporozoitos. oviducto. Conducto que une el ovario con el recep­
nematodos. adulto. microtricos. En los cestodos, solevantamientos del
hemozoina. Pigmento malárico. táculo seminal en los platelmintos.
leishmanioide. Arnastigoto. tegumento que sirven para aumentar la superfi­
hermafroditismo. Presencia de ambos sexos en un leptomona. Prornastigoto. cie de absorción. papila apical. Extremo anterior de algunos mira­
individuo. liendre. Huevo de los piojos. miracidio. Larva ciliada que emerge del huevo de cidios.
heterogónico. Ciclo evolutivo con alternancia de lisosoma. Vesícula protoplasmática rica en enzi­ los trematodos. parasitemia. Presencia de parásitos en la sangre.
generaciones de vida libre y parasítica. mas hidrolíticas.
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606 PARASITOLOGIA MEDICA GLOSARIO 607

parásito; parasitismo. Simbiosis en el cual un pseudoceloma. Cavidad del cuerpo de los nemato­ te dependiente para establecer una relación sim­ úlcera de oriente. Un tipo de leislunaniosis cutá­
simbionte de una especie vive sobre (ectoparásito) dos que carece de revestimiento seroso. biótica con otro ser. nea.
o en (endoparásito) otro miembro de otra espe­ pseudoparásito. Elemento orgánico o inorgánico simbiosis. Condición en la cual dos seres vivos de uta. Leishmaniosis mucocutánea producida por la
cie, vive a sus expensas y al cual, eventualmen­ que puede, groseramente, ser confundido con diversas especies, haqitualmente (pero no nece­ Leishmania braziliensis, también conocida como
te, puede dañar. parásitos. sariamente) viven juntos, con beneficio para uno espundia, pian bois o úlcera de los chicleros.
parásito accidental. Parásito que se encuentra en pseudopodio. Organelo apropiado para la locomo­ o para ambos. vacuola parasitófora. Vacuola de una célula hos­
un huésped no habitual. ción y aprehensión en los protozoos. singamia. Reproducción sexuada con fusión com­ pedera, la cual contiene parásitos.
parásito permanente. Parásito que vive toda su pseudoquiste. Grupo de protozoos dentro de la célula pleta de los gametos. verruga peruana. Fase eruptiva de la bartonelosis
existencia en o sobre su hospedero. hospedera. Se diferencia del quiste verdadero en
tapón mucoso. Substancia que cierra las aberturas transmitida por flebótomos.
parásito temporal; parásito intemitente. Parásito que carece de una pared quística, la cual está
vesícula hija. Vesícula formada a partir de la capa
polares en los huevos de Triclwris.
que intermitentemente depende de un hospede­ formada por los propios parásitos.
pupa. Etapa entre larva e imago en la metamorfosis taquizoito. Elemento que resulta de la multiplica­ germinativa y la cual presenta una estrnctura
ro para subsistir y luego lo abandona. similar a la hidátide que le dio origen.
ción acelerada del Toxop/asma dentro de la cé­
partenogénesis. Desarrollo de un individuo a partir completa (holometabólica) de un insecto.
vesícula prolígera. Yemaciones de la capa germi­
lula hospedera, produciendo los pseudoquistes.
de un huevo no fertilizado. pupario. Envoltura quitinosa de la pupa.
terciana. Malaria con crisis febriles cada cuarenta nativa de la hidátide, en la cual se forman los
pedipalpos. Segundo par de apéndices en los arác­ quelícero. Par de apéndices que sirven para ali­ protoescólices.
y ocho horas, provocado por Plamodium viva.\:,
nidos.
mentarse, en los arácnidos, garrapatas y ácaros. P. Ja/ciparum y P. ovale. xenodiagnóstico. Método de diagnóstico que utili­
período patente. Etapa de la infección parasitaria quiste. Forma inmóvil de resistencia y de multipli­ tripomastigoto. Etapa del ciclo evolutivo de Trypa­ za la infección experimental del vector u hospe­
en la cual se presenta sintomatología y es posi­
cación, envuelta por una doble membrana for­ nosomatidae en la cual el kinetoplasto es poste­
ble demostrar la presencia del parásito. dero.
mada por los protozoos. rior al núcleo, con membrana ondulante y un
período prepatente. Etapa de la infección parasi­ yemación. Reproducción asexuada en la cual la
quiste hidatídico. Conjunto de la hidátide y la re­ flagelo libre en la extremidad anterior
taria comprendida desde el momento de la in­ célula hija es de menor tamaño que la célula
acción adventicial del hospedero, en los cesto­ trofozoito. Forma vegetativa activa y que se ali­
fección hasta la aparición de la sintomatología madre y nace como un brote o yema, para luego
dos del género Echinococcus. menta, entre los protozoos.
o la presencia del parásito. desprenderse como individuo independiente.
quitina. Polisacárido nitrogenado componente del úlcera de los chicleros. Leishmaniosis mucocntá­
pian bois. Leishmaniosis mucocutánea producida Gemación.
exoesqueleto de los artrópodos. nea producida por la Leishmania brazi/iensis,
por la Leishmania braziliensis, también conoci­
da como espundia, úlcera de los chicleros o uta. rabditiforme. Larva que posee bulbo esofágico. también conocida como espundia, pian bois o zoonosis. Infección que se transmite en fonna natu­
plerocercoide. Metacestodo o larva que se forma a redia. Estado larval de los trematodos digenéticos uta. ral entre el hombre y los demás vertebrados.
partir del procercoide, en algunos cestodos. y que se forma por reproducción asexuada den­
poliembrionía. Desarrollo de más de un descen­ tro de un miracidio, de un esporonquiste o de
diente a partir de un cigoto. una redia madre.
poro excretor. Orificio en el cual desembocan los reprodución asexuada. Proceso de reproducción
canales excretores, localizados en el extremo sin que ocurra unión de gametos.
anterior en los nematodos y en el extremo pos­ reservorio. Fuente de infección.
terior en los trematodos. retrofección. Reinfección por larvas que emergen
predatismo, predación. Interacción animal en la de huevos colocados en la piel y, luego, reingre­
cual el predador mata a la presa para alimentar­ san al hospedero (Enterobius).
se. roptríes. Organelos elongados, densos y a menudo
procercoide. Metacestodo o larva que se forma a piriformes, que se extienden hacia la membrana
partir del coracidio, en algunos cestodos. celular, dentro de los anillos polares, en el com­
proglótida. Segmento de la estróbila de los cesto­ plejo apical de los Apicomplexa.
dos, la cual contiene los órganos reproductores rostelo. Prominencia retráctil en el ápex del escólex
masculinos y femeninos. de algunos cestodos.
promastigoto. Estado morfológico de los tripano­
somas, caracterizado por presentar el kineto­
sicigia. Fusión de dos ciliados, sin que lleguen a
perder su individualidad, durante la conjuga­
plasto por delante del núcleo, un flagelo que
ción.
emerge de la extremidad anterior y no tiene
i, membrana ondulante. signo de Witerbottom. Nódulos linfáticos en el
¡; protoescólex. Escólex juvenil que nace a partir de
brotes internos (yemación) en el quiste hidatídi­
cráneo que se observa en la enfermedad del sue­
ño.
co y en el cenuro. simbionte. Ser vivo que tiene una relación simbiótica
protoginia. Maduración precoz de las gónadas fe­ con otro ser vivo.
meninas con respecto de las gónadas masculi­ simbionte facultativo. Organismo que en forma
nas en un individuo hermafrodita. También se oportunista establece una relación simbiótica con
llama ginandria. otro ser, sin que necesariamente presente una
protonefridio. Organo excretor y termorregulador disposición fisiológica específica para ello.
. en cestodos y trematodos. Célula en llama. simbionte obligatorio. Organismo fisiológicamen-
INDICE DE MATERIAS

A Ascaris lumbricoides 40,41,111,l 12,164-171,332,424,


432, 433, 436,438,523, 525, 533, 542
Absceso hepático amibiano 125-127,436,437 Ascaris suum 161,168,433
Acanthamoeba spp. 25,43,224,302,305,412 Atovacuona 277,278,284
Acantocéfalos,generalidades 38 Azitromícina 150
Acción patógena de los parásitos 51,52
Aedes sp. 232,308,450,45 l B
Albendazol 140,170,177,186,193,292,323,333,336,
356,399,402,410,412,528,585 Babesia bigemina 384
Alloder111a11yss11s sa11gui11eus 489 Babesia spp. 224,384
Amblyomma sp. 490-494 Babesias 29
Amibas de vida libre 302-305,412 Babesiosis 384
Amibas,generalidades 25 Ba/amuthia mandrillaris 302-305
Amibiasis 55, 119-128 Balantidiosis 60,129-133
" cardíaca 420, 421 " , tratamiento 580, 592
" del pulmón 429 Ba/antidium co/i 23,26, 64, 111-115,129-133, 555
e inmunosupresión 529 Baylisascaris procyionis 333
" tratamiento '580,583,592,597 Befenio 585
" y fiebre 531,532 Benznidazol 262,418,517,585
A11cy/ostoma brazi/iense 178,225,332,547 Berliel/a studeri 112,221
Ancylostoma caninum l 78,225, 332, 537,547, Biología molecular de parásitos 45-47
Ancy/os/oma ceylanicum 178 Biomphalaria glabra/a 360, 361, 370
Ancylostoma duodena/e 51, l 12,332,424,433,533,537 Biomphalaria havanensis 362
Ancylostoma sp. 548 Biomphalaria peregrina 362
Anemia y parasitosis 536-540 Biomphalaria straminea 360,361
Anfotericina B 304,585 Biomphalaria tenagophila 360, 36 l
Angiostrongilosis abdominal 325-331, 544 Bioquímica de parásitos 39-45
Angiostrongy/us cantonensis 224,385,504, 545 Bithíonol 374,381
Angiostrongylus costaricensis 224, 325-33 l Blastocístosis l 6 l-163
Anisakiosis 220 Blas/ocystis hominis 11 l , 161-163
Anisalds simple.� 112 Blatla orienta/is 481, 482
Anisalds sp. 220,544 Blattela germanica 481
Anophe/es spp. 224,229,227-241, 232,302,450,451, Baophilus ammlatus 490, 493
545 Boaphi/us sp. 493
Anquilostomosis l 78-182 Brugia guayanensis 309
" ,tratamiento 58 l, 593 Brugia malayi 306-3 l O,424,432, 433,549
" y anemia 537 Brugia sp. 548
Apicomplexa, generalidades 26-29 Bulinus sp. 360
Apis mel/ifera 503 Butóxido de piperonílo 470
Arañas 496-502
Argos sp. 490 e
Argos persicus 494
Armil/ifer armi/latus 225,388 Cal/iphora sp. 463
Aroapyrgus co/ambiensis 371,373,374 Callilroga americana 462
Artropodos,caracteristicas generales 445-449 Callitroga macel/aria 463
Ascariasis 56,164-171,436 Capilariosis 436,550
" abscesos hepáticos 438 Capillaria aerophila 548,550
" transmisión congénita 521 Capil/aria hepatica 436,438
"· , tratamiento 581,593 Capillaria phi/ippinensis l 12, 220, 544
610 P,JRAS/TOLOGIA MEDICA INDICE DE M.-ITERl,JS 611

Ceguera de los ríos 312-317,409 Deltametrina 488 Endolimax nana 25, 113,124, 161,217-219 " e hígado 440
Centruroides sp. 502 Demodex brevis 488 Enfermedad de Chagas 251-264,436,554 " ,tratamiento 584,598
Cenurosis 387, 551 Demodex canis 556 " e hígado 435 " y fiebre 532,534
Cestodos,generalidades 33-36 De111odexfollic11/orum 488 " e inmunopatología 95 Fiebre y parasitosis 531- 535
Chilomastix mesnili 26,113,217,219 Demodicidosis 488,489 e inmunosupresión 527 Filaria de Medina 385
Chinches de cama 480,481 Dermacemor andersoni 494 " ocular 412 Filaríosis 306-311, 544
Chrysops sp. 456 De11nace111or sp. 490,493,494 " transfusional 261 " imnunopatología 96,97
Ciclosporosis 152-155 Dermanysstts avium 489 " ,transmisión congénita 509,515-517 " ma/ayi 310
" e imnunosupresión 529 Dermanyssus ga/linae 489 " ,tratamiento .582,583,595 " , tratamiento 583, 597
Ciliados,generalidades 27 Dermatitis linear 332 " , vacunas 99,100 " , vacunas 100, 101
Cime.r hemipterus 480 Dermatobia hominis 57,58,64,413,461,462 " y corazón 415-418 " ,transmisión congénita 520
Cime., lectularius 480 Dermatophagoides farinae 489 " y fiebre 532,533 " y corazón 424
Cisticercosis 355-358, 405,436 Dermatophagoides pteronyssinus 489 Enfermedad de Robles 312-3 l 7 " y fiebre 532,534
" del corazón 422 Diagnóstico directo de las parasitosis 562-570 Enfermedad del sueño 383 " y pulmón 431,432
" ocular 410,411 Diagnóstico indirecto de parasitosis 571-576 Entamoeba coli 23,25,113,161,217,218 Flagelados,generalidades 25-26
" tratamiento 584,598 Diaptomus sp. 445 Entamoeba dispar 529 Flebótomos 453-455
Cisticercus ce/lulosae 355-358 Dicrocoeliosis 436 Entamoeba gingiva/is 25,217,218 Fumagilina 292,412
Clindantlcina 240,277,278,284, 385,586 Dicrocoelium dendriticum 225,388,436 Entamoeba hartmanni 25, 119,124,297,218 Furazolidona 141,163,587
C/onorchis sinensis 225,387,436 Dientamoebafragi/is 26,111,112,217 Entamoeba histolytica 23, 25,40, 41, 50,55,111-115,
C/onorchis sp. 548 Dietilcarbamazina 310,315,328,387,586 119-128,131,218,280,429,436,437,529,548 G
Clonorquiosis 436 Difilobotriosis 201-211 Entamoeba po/ecki 25
Cloroquina 128,239,240,586 " , tratamiento 582, 594 Enterobiosis 188-193,544 Ga/ba (P.) viatri.r 376
Coccidios 26-29 " y anemia 539 " tratamiento 581, 593 Garrapatas 490-495
Cochliomyia americana 413 Diloxamida furoato 127 Enterobills vermicu/aris 112,113,118-193,546 Gastrodiscoides hominis 222
Cochliomyia homnivoa.\· 462 Dioctophyma renale 225,387,548 Enterocytozo�n bieneusi 111,112,116,287-292, 529 Gato y parasitosis del hombre 547-557
Coenurus cerebralis 551 Diphy//obothri11111 dendriticum 201-211 Enteromonas hominis 26,217,219 Giardia agi/is 134
Coenun,s seria/is 551 Diphy/lobothrium /atum 41,51,112,116,201-211,524, Eosinofilia pulmonar tropical 432 Giardia duodena/is 23,26,111-115,134-141,280,300,
Cotrimoxazol 154,163,277,278,283,292,431,586 539,540, Epidemiología y control de las parasitosis 103-108 523, 524, 548
Criptosporídiosis 146-151,581,592 Diphy/lobothrium pacificum 112,201-211 Equinococosis 338 Giardia intestina/is 134
" e imnunosupresión 527,528 Diphy/lobothrium sp. 113,201-211,445,544,548 Eristalis tena., 463 Giardia lamb/ia 134
Crotamitón 470,488 Dipilidosis 215-216 Erítromicina 150 Giardia muris 134
OJ•ptosporidium sp. 528 Dipylidium caninum 112,215-216,473,548,551 Escorpiones 502-503 Giardia sp. 50,553
Cryptosporidium baileyi 146 Dirofilaria immitis 310,431,433,453 Esparganosis 387 Giardiasis 134-14[, 553
Cryptosporidium meleagridis 146 Dirofilaria sp. 424,548 Espiramicina 150,278,514,587 " e inmunosupresión 529
Cryptosporidium nwris 146 Distomatosis hepática 375 Esquistosomosis 359-370,436 " , tratamiento 580,592
Cryptosporidiwn parvmn 111-115, 144, 146-151, 152, Diyodohidroxiquinolina 127,586 " e hígado 439,440 Glossina morsitans 383,460
527,529, 548,555 Dracontosis 385 " ,inmunopatología 95,96 Glossina palpa/is 383,460
Crysops spp. 308 Dracunculosis 385 " ,transmisión congénita 520 G/ossina sp. 224,456,460-461
Ctenocephalides canis 471,473, 556 Dracunculus medinensis 225,385,424,445,548 " ,tratamiento 584,598 Gnathostoma spinigerum 225,386,405,445,545,549
Ctenocephalides fe/is 471,473,556 Dusn 413 " ,vacunas 100 Gnathostomosis 386, 549
Ctenocepha/ides sp. 548 " y corazón 421,422 Gusano de Guinea 385
Cucarachas 481-483 E " y fiebre 534
Cu/e., pipiens 453 Estibogluconato de sodio 245,587 H
Cu/ex sp. 232,308,450-452 Echidnophaga gallinacea 556 Estrongiloidosis 183-187,544
Cule.r tarsalis 453 Echinococcus granu/osus 33-41,338,339,342,352,426, " e inmunosupresión 528 Haemaphysalis sp. 490
Culicoides sp. 308,455 436, 548,550 " ,tratamiento 581,593 Halzoun 388
Cyclops spp. 385 Echinococcus 111u/tiloc11/aris 338, 352-353, 436, 439, Evasión de la respuesta inmune por los parásitos 89-91 Helmintos, generalidades 3 l -38
Cyc/ospora cayetanensis 112,152-155,529 550 Heterophyes heterophyes 112,222
Cysticercus bovis 355 Echinococcus oligarthrus 338, 353, 550 F Hidatidosis 338-354, 402-404, 436,550
Cysticercus ce//u/osae 393,422,432,436,439 Echinococcus sp. 225 " de la columna vertebral 404-404
Cysticercus racemosus 393 Ec/tinococcus voge/i 338,353 Fannia spp. 463 " de los huesos 347-348
Echinostoma sp. 112,222, 548 Fansidar® 277, 278 " de piel y músculos 346
D Emetina 128,163,381,586 Fármacos antiparasitarios 585-591 " del bazo 345
Encefalitis granulomatos.a amibiana 304 Fascio/a hepatica 41,42,50,52,225,374-382,436,440, " del corazón 346,422, 423
Dapsona 277,284,501 Encepha/ilo=oon cuniculi 287-292 534,543,545 " del puhnón 344-345,426-428
Decametrina 470,487 Encepha/itozoon hellem 287-292,412 Fascio/opsis bus/d 112,221,545 " del sistema nervioso 346-3'47,400-404
Dehidroemetina 128, 163,38 J, 586 Encephalitozoon intestina/is 111-116,287-291, 412,529 Fasciolosis 375-382,436,544 " encefálica 400-402
612 PARASITOLOGIA MEDICA INDICE DE MATERIAS 613

" hepática 343-344, 438,439 Leishmania aethiapica 242 Meningitis eosinofilica 385,405 Oncltacerca volvu/us 224,306-308, 312-317, 409,455
" multilocular 436,439 Leishmania amazonensis 242 Meningoencefalitis amibiana primaria 303 520,543
" ocular 413 Leisltmania brasiliensis 45, 242 Metagamim11s sp. 548 Oncocercosis 312-317
" renal 345-346 Leishmania chagasi 242 Metaganimus yakagawai 112,222 " ocular 409
" ,tratamiento 584,598 Leisltmania da11a1•a11i 242,436,·533,548,555 Metronidazol 127,140,163, 300,301,588 " tratamiento 583,597
Himenolepiosis 212-215,544 Leishmania guayanensis 242 Microsporidios 29,144,148 Opisthorcltis Je/inetts 388
" ,tratamiento 582,594 Leisl1111a11ia ilifantum 242 Microsporidiosis 286-294 Opisthorchis viverrini 388,436
Hyalamma sp. 490, 494 Leishmania lainsanai 242 " e irununosupresión 529 Opistarchis sp. 225
Hymena/epis diminllla 214-215, 473 Leishmania majar 242 " ocular 411,412 Opistorquiosis 436
Hymenalepis nana 111, 212-214, 473 Leisltmania mexicana 45,242 " ,tratamiento 583,597 Ornidazol 140
Hymenalepis sp. 112 Leisltmania panamensis 242 Microsporidium africom1111 288,290,412 Ornitltodorus sp. 490,495
Hypa/obacera sp. 372,373 Leisltmania peruviana 242 Micrasparidium ceylanensis 288,290,412 Otabius sp. 490
Leishmania pifanai 242 Micrasparidi11111 sp. 149,287-290 Otabius megnini 495,556
Leislunania spp. 224,242-250,548 Miocarditis toxoplásmica y chagásica 63 Oxamniquina 368,588
Leislunania trapica 242,548 Maniliformis monilifarmis 38,112,222,483 Oxiuriosis 188-193
Inermicapsifer sp. 112,221 Leishmania vene=uelense 242 Marerastra11gy/11s castaricensis 325
Infección y enfermedad parasitarias 52,53 Leishmaniosis 242-250,555 Mosca tsé-tsé 460,461 p
lnmunodiagnóstico 91-96 " e inmunosupresión 528 Mosquitos 450-453
Inmunología de las infecciones parasitarias 66-1O I " transmisión congénita 519 Multiceps 11111/ticeps 355 Paludismo 227-241
Inmunoprofilaxis 97-101 " ,tratamiento 582,595 ·Mus nwsculus 474 Panstrongylus ge11iculatz1s 252,478
Inmunosupresión y parasitosis 526-530 " y fiebre 532,533 Musca domestica 255,413,457-460 Panstrongy/us lignarus 252
Insectos ponzoñosos 503-505 Limnaea tru11cat11/a 376 Myiasis 461-463 Panstrangylus megistus 252,477-479, 554
Iadamaeba biitschlii 25,113,124,217,218 Limnaea viatrb: 376 " ocular 413 Paragonimosis 371-374
lodoquinol 163 Lindano 469,470,487,498 " ,tratamiento 584,598
Isaspara bel/i 111,112,142-145,148,149,528,529 Linguatula serrata 225,388,432,548,557 N " y fiebre 532,534
Isaspara fe/is 551 Litamasaides carinii 39 " y pulmón 429,430
Isaspara haminis 156 Loa loa 306-3 JO,456 N-metilglucamina 245 Paraganimus amazanicus 311
Isosporosis 142-145,544 Loaosis 310 Naeg/eria fowleri 25,302-305 Parago11i11111s caliensis 371
" e irunusupresión 528 Laxasceles /aeta 499-502 Naegleria sp. 25,224 Paraganimus ecuadariensis 374
" ,tratamiento 580,58 l ,592 Loxoscelismo 499-502 Nasturtittm afficinale 376 Paraganimtts inca 371
ltraconazol 292,418 " ,tratamiento 585,599 Necator americanus 112, 178-182,332,424,433,53�, Paraganimus mexican11s 371-374
Ivennectina 186,315,333,386,488,528,587 L11tza111yia colombiana 453 537 Paraganimus napensis 371
frades spp. 384,490,493 L11tzamyia spp. 242-250,455,555 Nematodos,generalidades 36-38 Paragoninms peruviantts 371-374
Lutzamyia verrucarum 453 ;t Neostigmina 498 Paraganimus sp. 225,405,433,445,548
J Lycasa sp. 502 Neumocistosis 280-285 Paraga11imus westermani 371,545
" e inmunosupresión 526 Parasitosis del corazón 415-425
Jejenes 455 M " ,transmisión congénita 519 Parasitosis del hígado 435-44 l
Jerjeles 455 " ,tratamiento 583,596 Parasitosis del pulmón 426-434
Macracantltarhynclws hirudinace11s 38,112, 222,483 " y fiebre 533 Parasitosis del sistema nervioso central 393-406
1( Malaria 38,112,222,483 " y pulmón 430,431 Parasitosis oculares 407-414
Malaria 62, 227-241,436 Neurocisticercosis 356 Paromomicina 128,150,163,589
Kala-azar 435,436 " e hígado 435 Niclosamida 199,209,214,588 Patología general de las parasitosis 54-65
" ,transmisión congénita 517,518 Nifurtimox 262,417,517,588 Pediculosis 465-470
L " ,tratamiento 239,240,582,594,595 Nomenclatura de las parasitosis 53 " ,tratamiento 584,585,599
,vacunas 99 Nasema apis 286 Pediculus /111ma1111s 465-470,556
Lagachilascaris minar 386 y anemia 538,539 Nasema bambycis 287 Pentamidina 283,284,384,385,431,589
Larbich 332 " y fiebre 53 I. 532,533 Nasema cannori 287-290 Pentastomosis 557
Larva currens 185,332 Malatión 470 Nasema carnettm 287 Pentatrichomanas ltominis 300,30 I
Nasapsyl/us fasciat11s 473 Periplaneta americana 482
�ai:;as mig.rantes 332-337, 547 Maloprim® 277
cutanea 332 Mansanel/a azzardi 306-31O Nutrición y parasitosis 523-525 Pennetrina 470,488
e hígado 438 Mansanel/a perstans 306-31O Perro y parasitosis del hombre 547-557
tratamiento 584,597,598 Mansania sp. 308 o Pltaenicia cuprina 463
visceral 333,436,544 Marrara 388 Pltaenicia sericata 463
y fiebre 532,534 Mebendazol 170,177,193,323, 386,587 Octeotride 150 Plzlebotamus papatasi 455
Latrodectismo 496-499 Mefloquina 587 Oesapltagas/011111111 spp. 112,221 Phlebatamus spp. 242-250, 453, 555
" ,tratamiento 585,599 Meglumine 588
1 Oestrus avis 413,463 Phaneutria sp. 502
.\\.' .¡,
Latradectus mactans 496-499 Melarsoprol 384 O/igoryzomys langicaudata 474 Plttltirtts pubis 465-470
T
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614 P,IR,ISITOLOGl,1 MEDIC,1 INDICE DE MATERIAS


615

Physa/optera ca11casica 112,221 Sarcoptes sp. 548 Toxoplasmosis 58,265-279,436,544,551 Trimetoprim-sulfametoxazol 145, 526, 528, 586
Piojos 465-479, 556 Sarna 484-488 " adquirida 270-271 Tripanosomosis africana 383
Pipcrazina,sales de 170 " , tratamiento 584, 585, 599 " congénita 61,273-274, 509,510,512-515 " " , transmisión congénita 519
Pirantel pamoato 170, 193, 589 Schistosoma J,ae111atobi11111 45, 64, 359, 360, 368, 520, " de la embarazada 273 Triquinosis 318-324, 544,550
Piretrina 470 545 " del sistema nervioso central 404,405 " ocular 412
Pirimetamina 145,277,278,284,514,527,589 Schistosoma intercalatum 359 " e hígado 437 " , transmisión congénita 520-52 l
Piroplasmosis 384 Schistoso111ajapo11ic11111 64,359,368,436,438,440,520, " e inmunosupresión 526, 527 " , tratamiento 583, 597
Plas111odi11111 fa/cipar11111 227-239,435,518,538,539 545,546 " en ínmunocomprometidos y SIDA 272 " y corazón 423,424
Plas111odi11111 malariae 227-239, 533,538 Schistosoma 111a11soni 39,42,45,359-370,422,433,436, " ocular 407,408 " y fiebre 532,534
Plas111odi11111 ovale 227,232, 533, 538 438,439, 542,543 " , tratamiento 277, 278,583, 595, 596 T1:1pa11osoma brncei 224,383
Plas111odi11111 spp. 224,228 Schislosoma ma/1/,eei 359 " y corazón 418,4 l 9 T1:1pa11oso111a brucei gambiense 383, 460,519
Plasmodium viva.r 227-239,533,538 Schistosoma mekongi 359 " y fiebre 532,533 T1J•pa11osoma brucei rí10desie11se 383,461,519
Platelmintos, generalidades 31-36 Schistosoma sp. 225,541 " y pulmón 431 T1Jpa11osoma cruzi 39,40,115,224,25 l -264,280,383.
Pleistopl,ora sp. 288,289,291 Serge11/0111yia sp. 453 Transmisión congénita de parásitos 509-522 384,415,435,436, 476-479, 509-519,543,548,554
Pneumocystis cari11ii 149,224,277-285,290,430,519, Sigmodon hispidus 326 Tratamiento de las parasitosis 579-599 T1J'pa11oso111a rangeli 384
526, 533, 548 Si11111/i11111 spp. 224,308-313, 455 Trematodos,generalidades 32,33 T1i11ga penetrans 471,472,548,556
Polis/es sp. 503 Spirometra sp. 225,387,44, 548-551 Triatoma brosi/iensis 477,478 Tungosis 471
Prazicuantel 199,209,214-216,356,368,374,381,388, Stomoxis calcitrans 460,463 Triatoma dimidiata 252,477,478
398, 399, 551, 589 Strongy/oides fuelleborni 185 Triatoma infestans 252,255,256,477-479,554 u
Primaquina 239,284,590 Strongyloides stercora/is 60, 112-114, 183-187, 332, Triatoma rubrofasciala 478
Protozoos,generalidades 23-29 324, 432,433,533,548 Triatoma sordida 478 Uncinaria stenocephala 332,547
Pseudoterranova sp. 112,220 Sulfadiazina 514,527 Triatoma spinolai 252,255,415,478
Pseudothelplwsa sp. 372,373 Sulfadoxina-pirimetamina 240 Triatomas 476-480 V
Pu/ex irrilans 471, 473,556 Sulfadoxona 277 Trichinella brilovi 319,324
Pu/ex sp. 548 Sulfamidas 277, 278, 590 Trichine/la nativa 319-322 Vacunas antiparasitarias 45, 97,101
Pulgas 556 Suramina 315,384 Trichinella nelsoni 318,321 Vaselina azufrada 488
Pulicosis 471 Trichinella pseudospira/is 318,322, 324 Vectores mecánicos y biológicos 448
Pulmón eosinófilo filariano 432, 433 T Trichine/la sp. 224,534,548 Vespula jlavopi/osa 503
Trichinel/a spira/is 115, 318-324, 412,423, 520, 521, Villaforma corneae 287-290,412
Q Tábanos 456 542,543,550
Tablas terapéuticas 592-599 Tricl,0111011as hominis 26,217,295,296,301 w
Queratitis por Acantl,amoeba 412 Taenia m11/ticeps 387,548,551 Trichomonas tena.t 26,217,218,295,296,300,301
Quinina 240,385,590 Taenia saginata 112,113,117,194-200 Trichomonas vagina/is 26,44,224,295-301 Wuchereria bancrojii 58, 64, 306-31 O, 424, 432, 433,

Taenia seria/is 225, 387,551,548 ,1 . Tric/wstrongylus spp. 112,220 453,520
R Taenia solium 112, 113, 117, 194-200, 225, 355, 393, Tric/wris trichiura 51,111,112,172-177,220,523,524,
410,544 537, 538 X
Rail/etina sp. 112, 221 Taenia sp. 157,195, 196 Triclabendazol 381,591
Ratas y ratones 474,475 Taenia taeniaeformis 41,42,544 Tricocefalosis 172-177, 544 Xenodiagnóstico 566,567
Rat111s norvegicus 473, 474 Taeniarhynclws saginatus 194 " , tratamiento 581,593 Xenopsy/la cheopis 471-473
Ra1111s ral/us 472, 474 Teniasis 194-200 " y anemia 537,538
Retorta111011as intestina/is 26,219 " tratamiento 581,582,593 " y corazón 424 z
Rhipicepl,a/us sang11ine11s 493, 494,548,556 Tetraciclina 240,590 Tricomonosis 295-30 I
Rhipicepha/us sp. 490, 493 Tiabendazol 186,328,332,336,386,387,410,488,528, " ,tratamiento 583,596 Zoonosis parasitarias 106
Rl,odnius pa/lece11s 252 590
RJ,vd11i11s proli.rns 252, 477,478,479,
· 554· Tinidazol 140,591
Roxitromicina 150 Tily11.o sp. · 502
To.tascáris /e/mina 333, 334, :548,549
s To.tocara canis · 225,327,�3:l,·3:l4,336,337,409,424,
433,436,438, s21, sis; 534;548; 549 .
Sarasi1111/a plebeius 327 ·
To.rocara ·cáti ·27�,' -�3;¡: . . . · 09,. 4Í4; 4jj . ,f:i6, 438,
. 33,¡;,.4
Sarcocistosis 156-160 534,548,549 . ..
..
To.wca,'iz' sp. 334 . .. . . .. . . .
. .. .
Sarcocystis bovi-/10111i11is 156-160
Sarcocystis /10111inis 112,113 Toxocarosis 333-337
Sarcocystis lindemanni 159 " ocular 409; 4'!0 .... · ..--•---. .. •· .......... · · .. · · • ·
Sarcocystis sui-hominis 156-160 " transmisión ciingéiiifa·. 521 r. ;:, :.: ·. .-. • :;·.. ·:
Sarcopl,aga haemorrhoidalis 463 To.rop/asma gvndii ·4&; 63,159',·22::t,-265-279;405-408,
Sarcoptes scabiei 484-489,556 418,419,431,436,437,510-514,544,548,551,_553

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