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Plantel Campus
Presentan:
Laura Melissa Zarate
Stephanie Chantal Pacheco Gómez
Karen Denis Palacios Robles
1 Introducción ................................................................................................................ 4
2 Justificación ................................................................................................................ 5
4 Hipótesis ...................................................................................................................... 6
5 Objetivos ...................................................................................................................... 7
8 Discusión ................................................................................................................... 41
9 Conclusión ................................................................................................................. 41
10 Bibliografía ............................................................................................................. 41
11 Anexos .................................................................................................................... 42
3 Pregunta de investigación
Por lo antes mencionado se propone la siguiente pregunta ¿La página web ayuda a la
identificación de los tejidos del sistema digestivo?
4 Hipótesis
Identificar los tejidos del sistema digestivo por medio de una página web
Motilidad. El termino motilidad se refiere al movimiento que tienen los alimentos a lo largo
del tubo digestivo mediante los procesos de:
a) Ingestión: incorporar alimentos a la boca.
b) Masticación: masticar los alimentos y mezclarlos con saliva
c) Deglución: tragar los alimentos.
d) Peristalsis y segmentación: contracciones rítmicas, en ondas (peristalsis), y
contracciones mezcladoras en diferentes segmentos (segmentación) mueven los
alimentos a lo largo del tubo digestivo.
Barrera inmunitaria. El epitelio columnar simple que reviste el intestino, con sus uniones
estrechas intercelulares, suministra una barrera física a la penetración de microorganismos
patológicos y sus toxinas. También, las células del sistema inmunitario residen en el tejido
conjuntivo localizado justo debajo del epitelio para promover la respuesta inmunitaria. (Fox,
2016)
6.2 Generalidades del tubo digestivo
El tubo digestivo, desde el esófago al conducto anal, está compuesto de cuatro capas, o
túnicas. Cada túnica contiene un tipo de tejido dominante que efectúa funciones específicas
en el proceso digestivo. Las cuatro túnicas del tubo digestivo, de adentro hacia afuera, son
la mucosa, submucosa, muscular y serosa:
Mucosa
La mucosa, que reviste la luz del tubo digestivo, es la capa absortiva y secretoria principal.
Consiste en un epitelio columnar simple que se apoya en una lámina propia, una capa
delgada de tejido conjuntivo areolar que contiene numerosos ganglios linfáticos, los cuales
son importantes en la protección contra las enfermedades infecciosas. Externa a la lámina
propia se halla una delgada túnica de músculo liso conocida como muscular de la mucosa.
Es una capa muscular que determina la existencia de numerosos pliegues pequeños de
ciertas porciones del tubo digestivo; estos pliegues aumentan varias veces el área de la
superficie de absorción. Células especializadas en forma de copa “caliciformes” de la
mucosa secretan moco a lo largo de la mayor parte del tubo digestivo. (Hall, 2017)
Submucosa
Capa compuesta de tejido conectivo denso irregular fibroelástico. La capa submucosa
contiene el llamado plexo submucoso de Meissner, que es un componente del sistema
nervioso entérico y controla la motilidad de la mucosa y en menor grado la de la submucosa,
y las actividades secretorias de las glándulas. (Hall, 2017)
I. Boca
La boca es el inicio del aparato digestivo, y en ella tienen lugar toda una serie de funciones,
tanto mecánicas como químicas, que nos van a facilitar el trabajo de otros elementos del
sistema, como son el estómago y el intestino. Para ello la boca es un órgano complejo, y
en las funciones que en ella se desarrollan intervienen estructuras tan bien diseñadas como
son los dientes, la lengua y las glándulas salivares. No olvidemos que la boca tiene otras
funciones no digestivas, como son contribuir a la respiración en determinados casos, y a la
fonación. En su parte anterior se abre a través de la hendidura bucal; está limitada en su
parte superior anterior por los labios, lateralmente por la mucosa de las mejillas, en su parte
superior por el paladar, y en la parte inferior por la
lengua; posteriormente conexiona, a través del
istmo de las fauces, con la faringe. Las arcadas
dentarias (maxilar superior e inferior y los dientes
que en ellas se implantan) determinan la
separación entre el vestíbulo bucal y la cavidad
bucal propiamente dicha. (Sobotta, 2006)
II. Faringe
La faringe es una estructura de unos 14 cm. de longitud, músculo membranosa, compuesta
por: nasofaringe, bucofaringe y laringofaringe. Llega hasta nivel de la sexta cervical.
III. Esófago
El esófago es un tubo muscular fijo que conduce alimentos y líquido desde la faringe hacia
el estómago. El esófago atraviesa el cuello y el mediastino, sitios en los que está fijado a
las estructuras por medio de tejido conjuntivo. A medida que ingresa en la cavidad
abdominal, queda libre por una corta distancia, alrededor de 1 cm a 2 cm. La longitud total
del esófago es de unos 25 cm. En un corte transversal, la luz en su estado normal
colapsado presenta un aspecto ramificado debido a los pliegues longitudinales de la
mucosa. Cuando un bolo alimenticio atraviesa el esófago, la luz se expande sin lesionar la
mucosa.
La mucosa que tapiza el esófago en toda su longitud, tiene un epitelio plano estratificado
sin estrato córneo. En muchos animales, no obstante, el epitelio esta cornificado, lo cual es
un reflejo de la dieta consistente en alimentos toscos. En los seres humanos, las células
superficiales pueden exhibir algunos gránulos de queratohialina, pero normalmente la
queratinización no se produce. La lámina propia subyacente es semejante a la del resto del
tubo digestivo; el tejido linfático difuso está distribuido en toda su extensión y los nódulos
linfáticos se presentan, con frecuencia, en la proximidad de los conductos de las glándulas
mucosas esofágicas. La capa profunda de la mucosa, la muscular de la mucosa, está
compuesta por músculo liso organizado en forma longitudinal que comienza
aproximadamente a la altura del cartílago cricoides. Es extraordinariamente gruesa en la
porción proximal del esófago y se supone que contribuye al acto de la deglución.
La submucosa consiste en tejido conjuntivo denso irregular que contiene vasos sanguíneos
y linfáticos de gran calibre, fibras nerviosas y células ganglionares. Las fibras nerviosas y
las células ganglionares forman el plexo submucoso. Aquí también hay glándulas. Además,
el tejido linfático difuso y los nódulos linfáticos están presentes sobre todo en las porciones
superior e inferior del esófago, donde las glándulas submucosas son más predominantes.
La muscular externa se divide en dos estratos musculares, una capa circular interna y una
capa longitudinal externa. Esta capa es diferente de la muscular externa del resto del tubo
digestivo porque la tercera parte superior está compuesto por músculo estriado, una
continuación del músculo de la faringe. En la muscular externa de la tercera parte media
del esófago, se mezclan y se entretejen fascículos de músculo estriado y de músculo liso
la muscular externa de la tercera parte distal está compuesta sólo por músculo liso, como
en el resto del tubo digestivo. Un plexo nervioso, el plexo mientérico (plexo de Auerbach),
se halla entre las capas musculares interna y externa. Al igual que en el plexo submucoso,
aquí hay fibras nerviosas y células ganglionares. Este plexo inerva la muscular externa y
estimula la actividad peristáltica.
Como ya se mencionó, el esófago está fijado a las estructuras contiguas en casi toda su
longitud y, por lo tanto, su capa externa está compuesta por adventicia. Después de
introducirse en la cavidad abdominal, el resto más corto del tubo está cubierto por serosa,
el peritoneo visceral.
Las glándulas mucosas y submucosas del esófago secretan moco para lubricar y proteger
la pared luminal.
Las glándulas están presentes en la pared del esófago y son de dos tipos. Ambas secretan
moco, pero difieren en sus ubicaciones.
Las glándulas esofágicas propiamente dichas están en la submucosas. Estas
glándulas están dispersas en toda la longitud del esófago, pero un poco más
concentradas en la mitad superior. Son pequeñas glándulas tubuloacinosas
compuestas. Su conducto excretor está compuesto por epitelio estratificado
plano y suele ser visible cuando aparece en un corte porque tiene un aspecto
dilatado.
Las glándulas esofágicas cardiales se denominan así por su similitud con las
glándulas cardiales del estómago y se encuentran en la lámina propia de la
mucosa. Están presentes en la parte terminal del esófago y con frecuencia,
aunque no siempre, en la porción inicial del esófago.
El moco producido por las glándulas esofágicas propiamente dichas es levemente ácido y
sirve como lubricante de la pared luminal. Debido a que la secreción es relativamente
viscosa, en los conductos se producen quistes temporales. Las glándulas ubicadas cerca
del estómago protegen el esófago del reflujo del contenido gástrico. Sin embargo, en ciertas
situaciones, su eficacia no es completa y el reflujo excesivo produce pirosis, un trastorno
más conocido como acidez. Este trastorno puede evolucionar hasta convertirse en una
enfermedad por reflujo gastroesofágico (GERD) bien establecida.
El músculo de la pared esofágica está inervado por los sistemas nerviosos autónomo y
somático.
La musculatura estriada en la parte superior del esófago está inervada por neuronas
motoras somáticas del nervio vago, el nervio craneal X. El músculo liso de la parte inferior
del esófago está inervado por neuronas motoras viscerales del vago. Estas neuronas
motoras establecen sinapsis con las neuronas posinápticas, cuyos somas están ubicados
en la pared del esófago. (Ross, 2012)
IV. Estómago
El estómago es la parte más disponible del tubo digestivo; por arriba, se continúa con el
esófago y por abajo se vacía en el duodeno del intestino delgado. Las funciones del
estómago son almacenar alimentos, iniciar la digestión de las proteínas, matar bacterias
con la potente acidez del jugo gástrico y hacer progresar los alimentos hacia el intestino
delgado como un material pastoso llamado quimo. (Fox, 2016)
Los alimentos deglutidos son liberados desde el esófago a la región cardial del estómago.
Una línea imaginaria horizontal dibujada a través de la región cardial divide el estómago en
un fondo superior y un cuerpo inferior, que, juntos, constituyen cerca de dos terceras partes
del estómago. La porción distal del estómago se designa región pilórica y se inicia en un
área un poco amplia, el antro, para finalizar en el esfínter pilórico.
Las concentraciones del estómago agitan el quimo y lo mezclan por completo con las
secreciones gástricas. Tales contracciones también impelen de manera parcial los
alimentos digeridos desde el antro a través del esfínter pilórico hacia la primera parte del
intestino delgado. (Ross, 2012)
Los anatomistas macroscópicos subdividen el estómago en cuatro regiones. Los cardias,
que rodea el orificio esofágico; el fundus, que se extiende por encima de un plano horizontal
que atraviesa el orificio esofágico (cardial); el cuerpo, que se ubica debajo de ese plano y
la porción pilórica, que es la región con forma de embudo que desemboca en el píloro, la
región estrecha distal del esfínter entre el estómago y el duodeno. Los histólogos también
subdividen el estómago, pero solo en tres regiones. Estas subdivisiones no se basan en la
ubicación sino en los tipos de glándulas que aparecen en la mucosa gástrica. Las regiones
histológicas son las siguientes:
• La región cardial (cardias) la parte cercana al orificio esofágico, que contiene las
glándulas cardiales.
• La región pilórica (píloro), la parte proximal con respecto al esfínter pilórico, que
contiene las glándulas pilóricas
• La región fúndica (fundus), la parte más grande del estómago que está situada entre
el cardias y el píloro y contiene las glándulas gástricas o fúndicas.
La superficie inferior del estómago está organizada en largos pliegues llamados arrugas,
las cuales pueden verse a simple vista. El examen microscópico de la mucosa gástrica
muestra que está asimismo plegada. Las aberturas de tales pliegues en la luz del estómago
se denominan foveolas gástricas. Las células que revisten los pliegues secretan varios
productos hacia el estómago; dichas células forman las glándulas gástricas exocrinas.
(Ross, 2012)
Las glándulas gástricas contienen varios tipos de células que secretan diferentes productos:
Células mucosas del cuello, las cuales secretan moco y suplementan a las
células mucosas superficiales, las que revisten la superficie luminal del
estómago y las foveolas gástricas.
Células parietales, las cuales secretan ácido clorhídrico.
Células principales (o cimógenas), las cuales secretan pepsinógeno, una
forma inactiva de la enzima digestiva de las proteínas pepsina.
Células tipo enterocromafines (ECL), situadas en el estómago y el intestino,
las cuales secretan histamina y 5 hidroxitriptamina como reguladores
paracrinos del tubo digestivo.
Células G, que secretan la hormona gástrica hacia la sangre.
Células D, que secretan la hormona somatostatina.
V. Intestino delgado
El intestino delgado se inicia en el duodeno y termina en la válvula ileocecal, por la que se
une a la primera parte del intestino grueso. Su longitud es variable y su calibre disminuye
progresivamente desde su origen hasta la válvula ileocecal y mide de 6 a 7 metros de
longitud. El duodeno, que forma parte del intestino delgado, mide unos 25-30 cm de
longitud; el intestino delgado consta de una parte próxima o yeyuno y una distal o íleon; el
límite entre las dos porciones no es muy aparente. El duodeno se une al yeyuno después
de los 30 cm a partir del píloro. El yeyuno-íleon es una parte del intestino delgado que se
caracteriza por presentar unos extremos relativamente fijos: El primero que se origina en el
duodeno y el segundo se limita con la válvula ileocecal y primera porción del ciego. Su
calibre disminuye lenta pero progresivamente en dirección al intestino grueso. El límite entre
el yeyuno y el íleon no es apreciable. Al intestino delgado, principalmente al duodeno, se
vierten una diversidad de secreciones, como la bilis y el jugo pancreático. (Fox, 2016)
La pared del intestino delgado responde a la estructura de cuatro capas, de fuera a dentro,
serosa peritoneal, capa muscular submucosa y mucosa. La última está formada por el
corion y por el epitelio absorbente, constituido por
una sola capa de células cilíndricas con núcleo
central y polo libre dotado del llamado borde
estriado o ribete en cepillo. Entre ellas se hallan
dispersas células caliciformes, las células epiteliales
se encargan de la absorción de los alimentos. (Fox,
2016)
La superficie del intestino delgado está aumentada
por las siguientes estructuras: válvulas conniventes
o de Kerkring; vellosidades intestinales y
microvellosidades que integran el llamado borde
estriado o ribete en cepillo, están limitadas por una
doble membrana recubierta de vello o pelusa Fuente: Sobotta, J. (2006). Atlas de
anatomía humana (Vol. 2). Ed. Médica
constituidos por finísimos filamentos de naturaleza
Panamericana.
mucopolisacárida.
La irrigación del intestino delgado corre a cargo del tronco celíaco y de la arteria
mesentérica superior. La inervación corresponde al simpático. En el intestino delgado,
principalmente en el duodeno se realiza la digestión de proteínas, lípidos, ácidos nucleicos,
y carbohidratos. (Fritsch, 2008)
VI. Intestino grueso
El intestino grueso se inicia a partir de la válvula ileocecal en un fondo de saco denominado
ciego de donde sale el apéndice vermiforme y termina en el recto.
Desde el ciego al recto describe una serie de curvas, formando un marco en cuyo centro
están las asas del yeyuno íleon. Su longitud es variable, entre 120 y 160 cm, y su calibre
disminuye progresivamente, siendo la porción más estrecha la región donde se une con el
recto o unión recto sigmoidea donde su diámetro no suele sobrepasar los 3 cm, mientras
que el ciego es de 6 o 7 cm.
Tras el ciego, la porción ascendente del intestino
grueso es denominada como colon ascendente
con una longitud de 15 cm, para dar origen a la
siguiente porción que es el colon transverso con
una longitud media de 50 cm, originándose la
última, porción que es el colon descendente con
10 cm de longitud. Por último, se diferencia el
colon sigmoideo, recto y ano. El recto es la parte
terminal del tubo digestivo. (Sobotta, 2006) Fuente: Fritsch, Helga, et al. Atlas de
El intestino grueso, como el resto del tubo digestivo, anatomía: con correlación clínica. Médica
mantiene la estructura de cuatro capas: serosa, Panamericana, 2008.
I. Glandulas salivales
Las glándulas salivales en los mamíferos son glándulas exocrinas que producen la saliva,
la cual es un líquido incoloro de consistencia acuosa o mucosa, se produce un litro al día,
es una solución de proteínas, glucoproteínas, hidratos de carbono y electrólitos y contiene
células epiteliales descamadas y leucocitos. Las glándulas salivales grandes están
representadas por 3 glándulas pares: las glándulas sublinguales: ubicadas en el tejido
conectivo de la cavidad oral, glándulas parótidas y submaxilar: ubicadas por fuera de la
cavidad oral. (Sobotta, 2006)
Las glándulas cuentan con células mioepiteliales, que se localizan entre las células
glandulares y la lámina basal. Son células aplanadas y su contracción ayuda a la expulsión
de la saliva. Además, cuentan con un sistema de conductos excretores. Las primeras
porciones se denominan conductos intercalares, luego son intralobulares y se continúan en
los conductos salivales o estriados. Las
glándulas salivales se encuentran
alrededor de la boca y producen la
saliva que humedece los alimentos para
ayudar en el proceso de masticación y
deglución. La saliva contiene enzimas
(amilasa o ptialina) que comienzan el
proceso de digestión, convirtiendo el
almidón en maltosa. (Sabotta & Welsch,
2008) Fuente: Fritsch, Helga, et al. Atlas de anatomía:
con correlación clínica. Médica Panamericana,
2008.
Las tres principales glándulas son las siguientes:
II. Hígado
El hígado es un órgano o víscera del cuerpo humano y, a la vez, la glándula más voluminosa
de la anatomía y una de las más importantes en cuanto a la actividad metabólica del
organismo. Desempeña funciones únicas y vitales como la síntesis de proteínas
plasmáticas, función desintoxicante, almacén de vitaminas, glucógeno, etc. Además, es el
responsable de eliminar de la sangre las sustancias que pueden resultar nocivas para el
organismo, transformándolas en otras innocuas.
El hígado se localiza en la región del hipocondrio derecho del abdomen (no suele
sobrepasar el límite del reborde costal), llenando el espacio de la cúpula diafragmática,
donde puede alcanzar hasta la quinta costilla, y se relaciona con el corazón a través del
centro frénico, a la izquierda de la cava inferior. Su consistencia es blanda y depresible, y
está recubierto por una cápsula fibrosa, sobre la cual se aplica el peritoneo, parte de la
superficie del hígado (excepto en el área desnuda del hígado, que corresponde a su
superficie postero-superior).
Macroscópicamente se trata de un órgano de color rojo pardo, de consistencia: friable
(frágil), que está constituido por un parénquima, rodeado por una fina cápsula fibrosa,
llamada cápsula de Glisson. Su longitud en el adulto es de aproximadamente 28 por 15 cm
en sentido anteroposterior, y 8 cm de espesor a nivel del lóbulo derecho. Su eso aproximado
1500 g. (Sabotta & Welsch, 2008)
Está dividido en cuatro lóbulos:
Lóbulo derecho, situado a la derecha
del ligamento falciforme.
Lóbulo izquierdo, extendido sobre el
estómago y situado a la izquierda del
ligamento falciforme.
Lóbulo cuadrado, visible solamente
en la cara inferior del hígado; se
encuentra limitado por el surco umbilical
a la izquierda, el lecho vesicular a la
derecha y el hilio del hígado por detrás.
Lóbulo de Spiegel (lóbulo caudado),
Fuente: Fritsch, Helga, et al. Atlas de anatomía:
situado entre el borde posterior del hilio
con correlación clínica. Médica Panamericana,
hepático por delante, la vena cava por
2008.
detrás.
III. Pancréas
El páncreas es un órgano impar que ocupa una posición profunda en el abdomen, adosado
a su pared posterior a nivel de las primera y segunda vértebras lumbares junto a las
suprarrenales, por detrás del estómago, formando parte del contenido del espacio
retroperitoneal. Por estas razones es un órgano muy difícil de palpar y en consecuencia sus
procesos tumorales tardan en ser diagnosticados a través del examen físico. (Sabotta &
Welsch, 2008)
Es una glándula que pertenece a los sistemas digestivo y endocrino, pudiendo diferenciar
ambas funciones:
• Endocrina: produce ciertas hormonas importantes, incluyendo insulina, glucagón y
somatostatina.
• Exocrina: segrega jugo pancreático que contiene enzimas digestivas que pasan al
intestino delgado. Estas enzimas ayudan en la ruptura de carbohidratos, lípidos, proteinas
y ácidos nucléicos en el quimo.
Tiene forma cónica y su longitud oscila entre 15 y 20 cm, conuna anchura de unos 3,8 cm
y un grosor de 1,3 a 2,5 centímetros. El peso es de unos 70 g.
Anatómicamente se distinguen las siguientes partes:
• Cabeza: Dentro de la curvatura duodenal, medial y superior.
• Proceso unciforme: Posterior a los vasos mesentéricos superiores, mediales e inferior.
• Cuello: Anterior a los vasos mesentéricos superiores. Posterior a él se crea la vena porta.
A la derecha de la cabeza.
• Cuerpo: Continúa posterior al estómago hacia la derecha y ascendiendo ligeramente.
• Cola: Termina tras pasar entre las capas del ligamento esplenorenal. La única parte del
páncreas intraperitoneal.
• Conducto pancreático: Llamado también Conducto de Wirsung. Empieza en la cola
dirigiéndose a la derecha por el cuerpo. En la cabeza cambia de dirección a inferior. En la
porción inferior de la cabeza se une al conducto colédoco acabando en la ampolla
hepatopancreática o de Vater que se introduce en el duodeno descendente.
• El conducto pancreático accesorio: llamado también Conducto de Santorini, se forma de
dos ramas, la 1ª proveniente de la porción descendente del conducto principal y la 2ª del
proceso unciforme.
Vesícula biliar
Anatómicamente distinguimos: vesícula biliar, colédoco,
esfínter de Oddi, ampolla de Vater, conducto pancreático y
conducto cístico.
La bilis sale del hígado por dos conductos hepáticos que se
reúnen formando el colédoco, el que llega a su vez el
Fuente: Fritsch, Helga, et al. Atlas de
conducto cístico, desembocadura de la vesícula biliar. El
anatomía: con correlación clínica.
colédoco termina junto con el conducto pancreático de
Médica Panamericana, 2008.
Wirsung en la ampolla de Vater, que se abre en el
duodeno; en la terminación del colédoco se encuentra el esfínter de Oddi. (Fritsch, 2008)
6.4 Etapas del proceso digestive
El tiempo de permanencia de los alimentos en cada una de las partes del tubo digestivo es
esencial para un procesamiento óptimo y para la absorción de nutrientes. Además, se
precisa una mezcla adecuada, pero como las necesidades de mezcla y propulsión son muy
distintas en cada estadio del proceso, cada una de ellas está controlada por numerosos
mecanismos nerviosos y hormonales de retroalimentación, dirigidos a que ambas tengan
lugar de la mejor forma posible, ni demasiado rápidas, ni demasiado lentas. La cantidad de
alimentos que una persona ingiere depende principalmente de su deseo intrínseco de ellos,
es decir, del hambre. El tipo de alimento que se busca con preferencia en cada momento
depende del apetito. Estos mecanismos constituyen sistemas de regulación automática
muy importantes para mantener un aporte nutritivo adecuado al organismo. (Hall, 2017)
6.4.1 Digestión
En el proceso de la digestión los alimentos complejos se descomponen en monosacáridos,
aminoácidos, ácidos grasos, glicerol y varios componentes más. Sólo estas unidades tan
simples pueden ser utilizadas por las células o incorporadas al protoplasma viviente. La
digestión es un proceso es fisiológico esencial. Los procesos digestivos son mecánicos y
químicos.
La digestión y la absorción se producen mientras el alimento se mueve lentamente a través
del tubo digestivo. La fuerza propulsora la proporcionan casi siempre los cilios o las
musculaturas especiales del mismo. El tipo de actividad muscular que es característico de
las vísceras huecas se denomina peristalsis. La peristalsis ha sido definida como una onda
de contracción que va precedida de una onda de relajamiento.
Además de la perístasis existen otros movimientos de la musculatura. Un tono rítmico de
los distintos estratos musculares produce variaciones lentas de las dimensiones del tubo
digestivo. A veces, se aprecia superpuesta al tono rítmico, una fuerte segmentación rítmica
más frecuentemente en el duodeno y en el yeyuno que esencialmente es un proceso
mezclador. Los movimientos pendulares en los que participan tanto la musculatura
longitudinal como la circular, producen movimientos rítmicos de vaivén de las vueltas del
tubo digestivo y tienden a forzar al alimento a moverse de un lado a otro del bucle,
produciendo un rápido mezclado.
La actividad de la mucosa muscular puede ser también importante en el mezclado y
transporte del alimento, pero en el intestino delgado probablemente sirve de forma especial
para mover las microvellosidades alrededor del alimento. Las glándulas del tubo digestivo
medio o divertículo digestivo forman a partir del estómago una estructura especial. Estas
glándulas foliculares comunican con el estómago mediante un sistema de conductos, y
están recubiertas de células epiteliales que desempeñan varias funciones elaboración de
enzimas, fagocitosis, absorción, almacenamiento de alimento y excreción. (Hall, 2017)
6.4.2 Absorción
Los monosacáridos, los aminoácidos y el resto de los productos de la digestión deben pasar
a los tejidos antes de que puedan realizar sus funciones esenciales en la célula. El proceso
mediante el cual son transferidos desde los centros de digestión se denomina absorción
paso desde el tracto digestivo a los fluidos circulatorios.
En todos los vertebrados una porción de la pared del intestino delgado está implicada en
la absorción, aunque puede darse una cierta absorción en casi todos los puntos del tubo
digestivo.
La pared del intestino está plegada y acanalada de forma diversa para proporcionar una
intensa superficie para la absorción: Pliegues de Kercking → Vellosidades →
Microvellosidades.
Las microvellosidades son órganos absorbentes altamente especializados que poseen un
núcleo que contiene una red de capilares que derivan de los vasos sanguíneos de la pared
del tubo digestivo. Cada una contiene, también, un capilar linfático central o vaso quilífero
que comienza en un ciego que se encuentra bajo el epitelio, en las proximidades de la punta
de la vellosidad, y que drena hacia los principales canales linfáticos de la pared del tubo
digestivo.
La opinión general es que los lípidos pasan primordialmente a los vasos quilíferos mientras
que los azúcares y los aminoácidos son absorbidos directamente por los capilares
sanguíneos. Tanto las vellosidades como los repliegues intestinales contienen músculo liso
y los movimientos rítmicos que se producen de esta forma son importantes para poner a
las vellosidades en contacto con el contenido intestinal y mantener la circulación en los
vasos quilíferos, linfáticos y pequeños vasos sanguíneos. (Hall, 2017)
6.4.3 Defecación
Las sustancias no digeridas o no absorbidas son eliminadas por el ano. El recto casi nunca
contiene heces, en parte debido a la presencia, a unos 20 cm del ano y la unión entre la
sigma y el recto, de un débil esfínter funcional. En esa zona existe también un ángulo agudo
que aporta una resistencia adicional al llenado del recto.
Cuando un movimiento de masa fuerza a las heces a penetrar en el recto, surge el deseo
de la defecación, con una contracción refleja del recto y relajación de los esfínteres anales.
(Hall, 2017)
El goteo continuo de material fecal por el ano se evita por la contracción tónica de:
El esfínter anal interno, que es un engrosamiento el músculo liso circular de
varios centímetros de longitud que se encuentra inmediatamente anterior al
ano.
El esfínter anal externo, compuesto por músculo voluntario estriado que rodea
el esfínter interno y se extiende en sentido distal a partir de él. El esfínter
externo está controlado por fibras nerviosas del nervio pudendo, que forma
parte del sistema nervioso somático y que, por tanto, se encuentra bajo control
voluntario consciente, o al menos, subconsciente; el esfínter se mantiene
habitualmente cerrado de forma subconsciente, a menos que una señal
consciente inhiba su constricción.
6.5.1 Laminillas
I. Labio ++
Los labios son dos pliegues carnosos que delimitan el orificio de entrada a la cavidad bucal.
Aquí el epitelio queratinizado fino de la piel de la cara cambia al epitelio paraqueratinizado
grueso de la mucosa bucal. La zona de transición, el borde libre de los labios, se caracteriza
por tener papilas altas de tejido conjuntivo que empujan mucho la base del epitelio
estratificado plano queratinizado. Los vasos
sanguíneos y las terminaciones nerviosas en estas
papilas son la causa del color rojizo y de la exquisita
sensibilidad táctil de los labios.
Corte un corte sagital de labio teñido con H-E en el
que se ve la piel de la cara, el borde libre y la
transición a la mucosa bucal. Los rectángulos
numerados indican regiones representativas de cada
uno de los sitios, donde se observa el cambio de
espesar del epitelio desde la superficie facial o
externa del labio hasta la superficie oral o interna.
(Ross, 2012)
distribuyen en tres planos entrelazados, cada uno dispuesto en forma perpendicular a los
otros dos. Este modelo de organización es exclusivo de la lengua. Provee una flexibilidad y
una precisión enormes en los movimientos linguales que son indispensables para el habla
humana, así como para las funciones de digestión local y deglución. Esta organización
también permite identificar con facilidad el músculo lingual. (Ross, 2012)
III. Glándula submandibular
Se encuentran por debajo del piso de la boca, a ambos lados, cerca de la mandíbula. Un
conducto excretor parte de cada glándula y se dirige hacia adelante y hacía la línea media
hasta alcanzar una papila situada en el piso de la boca, en una posición lateral con respecto
al frenillo de la lengua. Los componentes secretores de las glándulas submandibulares son
los ácinos, que comprenden tres
tipos: ácinos serosos (que son
secretores de proteínas como
los de la glándula parótida),
ácinos mucosos (que secretan
mucina) y ácinos mixtos (que
contienen células secretoras
tanto serosas como mucosas).
En los ácinos mixtos las células
mucosas tienen un casquete de
células serosas que
Fuente: Ross, M. H., & Pawlina, W. (2012). Histología.
habitualmente recibe el nombre de Texto y atlas color con biología celular y molecular.
semiluna serosa. Estudios recientes Ed. Médica Panamericana.
indican que la semiluna es un
artefacto de la técnica histológica y que todas las células están alineadas para secretar
hacia la luz del ácino. Parece que la fijación tradicional en formaldehído expande las células
mucosas que, en consecuencia, aprietan las células serosas hasta que
adquieren su posición de casquete. (Ross, 2012)
V. Glándula sublingual
Las glándulas sublinguales son las más pequeñas de las glándulas salivales mayores
pares. Sus múltiples conductos excretores pequeños desembocan en los conductos
submandibulares y también en forma directa en el piso de la cavidad bucal. La glándula
sublingual se parece a la submandibular porque
contiene elementos tanto serosos como mucosos.
Sin embargo, en la sublingual predominan los
ácinos mucosos. Algunos de los ácinos con
predominio mucoso poseen semilunas serosas
pero es muy raro hallar ácinos serosos puros.
(Ross, 2012)
Fuente: Ross, M. H., & Pawlina, El revestimiento epitelial del tubo digestivo consiste en un
W. (2012). Histología. Texto y epitelio que se renueva con regularidad; cada porción tiene
atlas color con biología celular y un tiempo de recambio y una ubicación de las células madre
molecular.
que son característicos. En el estómago las células madre
Ed. Médica Panamericana.
están en el cuello de las glándulas de la mucosa.
Las células que migran hacia arriba para
formar las células mucosas de las fositas
gástricas y de la superficie libre tienen un
tiempo de recambio que oscila entre 3 y
5 días, mientras que en las células que
migran hacia abajo para formar las
células parietales, las células principales
y las células enteroendocrinas de las
glándulas el tiempo de recambio es de
alrededor de 1 año. (Ross, 2012)
IX. Colon
El colon, también llamado intestino grueso, es parte del sistema digestivo. Es un tubo largo
y hueco que se encuentra al final del sistema digestivo. En él se encuentran las glándulas
simples que son abundantes y se extienden a través de todo el espesor de la mucosa. Tanto
las glándulas como la superficie están revestidas por un epitelio simple cilindrico que
contiene células caliciformes, células absortivas y células enteroendocrinas. Las células
madre están restringidas en el fondo de las glándulas y la zona normal de replicación se
extiende por más o menos un tercio de la altura de la cripta.
En la figura () se muestra con un aumento de 30x un corte transversal del intestino grueso. Se ven
las cuatro capas que conforman la pared del colon: la mucosa (Muc), la submucosa (SubM), la
muscular externa (ME) y la serosa (S). Aunque estas capas son las mismas que las del intestino
delgado, deben destacarse varias diferencias. El intestino grueso no tiene vellosidades, como
tampoco pliegues circulares (válvulas conniventes). Por otra parte, la muscular externa se organiza
de manera distintiva y esto es evidente en la microfotografía. La capa longitudinal (ME[l]) es
sustancialmente más delgada que la capa circular (ME[c]) excepto en tres sitios en los que el
músculo liso longitudinal se dispone en la forma de una bandeleta gruesa. En la microfotografía
aparece una de estas bandeletas, que reciben el nombre de tenias del colon (TC). Dado que el
colon se ha seccionado transversalmente, la tenia del colon también se ve en corte transversal. Las
tres tenías del colon se extienden a lo largo de todo el intestino grueso hasta el recto sin continuarse
en este último. La submucosa consiste en tejido conjuntivo bastante denso, no modelado. Contiene
los vasos sanguíneos mayores (BV) y regiones de tejido adiposo. (Ross, 2012)
La mucosa, vista con más aumento (140x), contiene glándulas tubulares rectas no
ramificadas que se extienden hasta la muscular de la mucosa (MM). Las flechas señalan
los orificios de desembocadura de algunas de las glándulas en la superficie intestinal. En
general, la luz de las glándulas es estrecha excepto en su porción más basal, donde con
frecuencia está levemente dilatada (asteriscos, microfotografía de abajo, a la izquierda).
Entre las glándulas (Gl) hay una lámina propia (LP) que contiene una cantidad abundante
de linfocitos y otras células del sistema inmunitario. Los dos rectángulos incluyen regiones
de la mucosa que se examinan con más aumento en las microfotografías de abajo. (Ross,
2012)
En esta microfotografía, con aumento de 525x se ve la muscular de la mucosa (MM) y las
células de la lámina propia (LP), muchas de las cuales son fáciles de reconocer como
linfocitos o plasmocitos. Las células musculares lisas en la muscular de la mucosa se
organizan en dos capas. Obsérvese que las células musculares señaladas por las puntas
de flecha exhiben núcleos esferoidales, pero otras aparecen como regiones eosinófilas más
o menos redondeadas. Estas células se han seccionado en sentido transversal. Justo
encima de estas fibras musculares lisas cortadas transversalmente
hay otras que aparecen en corte longitudinal y exhiben núcleos alargados y bandas largas
de citoplasma eosinófilo. Las células que tapizan la superficie luminal del colon y sus
glándulas en su mayoría son células
absortivas (AC) y células caliciformes
(GC), éstas se pueden observar en la fig.
con aumento de 525x. Las células
absortivas tienen una fina chapa estriada
bien visible donde las flechas señalan los
orificios de las glándulas. Dispersas entre
las células absortivas están las células
caliciformes (GC). Hacia el interior de las
glándulas las células absortivas se tornan
más escasas, mientras que las células
caliciformes aumentan en cantidad.
(Ross, 2012)
En el conducto anal la mucosa colónica del recto se continua con la epidermis de la piel
(figs. -)
Pueden distinguirse varias zonas epiteliales:
Zona colorectal con mucosa clónica, en la que a veces las criptas son muy cortas y
de estructura irregular.
Zona de transición anal (zona intermedia), una zona en la que hay tipos epiteliales
diferentes con una organización variable.
Zona de la piel perianal (zona cutánea) con epitelio estratificado plano queratinizado.
Es característico que en la zona de transición anal haya un epitelio estratificado plano
no queratinizado con 4-9 capas celulares (zona alba).
En el segmento proximal las células superficiales también pueden ser cubicas o cilíndricas.
La parte proximal de la zona de transición forma hasta 10 abultamientos longitudinales de
1 cm de largo (columnas anales) en los que se encuentran glomérulos vasculares surtidos
por arterias. Esta zona también se llama zona hemorroidal (interna). Las columnas anales
están unidas por pliegues transversales (válvulas semilunares). Desde los senos y las
columnas se invaginan conductos epiteliales tubulares que también se conocen como
glándulas anales.
Estos conductos epiteliales alcanzan el musculo liso del esfínter anal interno pero rara vez
el musculo estriado del esfínter anal externo. El epitelio glandular se parece al de la zona
de transición proximal. Con frecuencia se encuentra un epitelio estratificado estratificado
cilíndrico secretor active. En la región basal del epitelio hay células mioepiteliales. En sus
inmediaciones se acumulan muchos linfocitos. Es muy probable que estas estructuras
glandulares representan un resto filogenético de glándulas activas. Participan en la
formación fistulas. La parte distal de la zona de transición también recibe el nombre de zona
intermedia. Está cubierta por un epitelio estratificado plano no queratinizado o levemente
queratinizado y contiene muchas fibras elásticas y glándulas sebáceas pequeñas sin pelos
asociados. En toda la región del conducto anal suele haber tejido linfático, el que pude
introducirse en el epitelio y puede formar folículos y asociaciones para foliculares. En la piel
perianal hay glándulas sudoríparas, glándulas sebáceas, glándulas apocrinas y pelos.
El hígado es la glándula, órgano, o víscera más grande del cuerpo. Está situado bajo el
diafragma y protegido por las costillas, y lo recubre una cápsula de tejido conectivo fibroso
que penetra en el órgano para formar tabiques que lo dividen en lóbulos y lobulillos. La
formación del hígado es a partir de una invaginación del tubo digestivo que se produce
durante el desarrollo embrionario, por tanto, tiene un origen epitelial. Los hepatocitos son
las células que forman la mayor parte del hígado y son los principales responsables de su
función. Una gran parte de la sangre que llega al hígado proviene de la vena porta que
recoge los productos de la digestión que han sido absorbidos. Esta fuerte irrigación
sanguínea es lo que hace que el hígado tenga un color rojizo. Las funciones del hígado
están estrechamente relacionadas con las del tubo digestivo, pero no sólo con ellas.
La organización celular del hígado es relativamente sencilla puesto que es la repetición de
una estructura básica denominada lobulillo hepático. Los lobulillos suelen estar separados
entre sí por tejido conectivo, aunque no en todas las especies es claramente. Tienen forma
de prisma poligonal que mide de 1 a 2 mm de diámetro. En secciones transversales tiene
una forma aproximada de hexágono con una vena central o centro lobulillar de gran
diámetro. En los vértices del hexágono, entre lobulillos contiguos, se encuentran los
espacios portales formados por tejido conectivo y por las denominadas tríadas portales,
compuestas por una rama de la vena porta, una rama de la arteria hepática y un conductillo
biliar. También poseen vasos linfáticos y fibras nerviosas. Los vasos portales y la vena
central se comunican gracias a capilares que discurren entre los hepatocitos denominados
capilares sinusoidales, cuya pared está compuesta por una capa discontinua de células
endoteliales fenestradas que carecen de membrana basal. Estos capilares discurren de
forma radial, recogen el fluido de las venas portas y arterias de los vértices, además de la
secreción endocrina de los hepatocitos, y confluyen en el centro del lobulillo para liberar su
contenido en la vena centrolobulillar. La confluencia de las venas centro lobulillares da lugar
a las venas hepáticas que finalmente drenan en la vena cava inferior. (Arias, 2015)
Fuente: Gissen, P., & Arias, I. M. (2015). Structural and functional hepatocyte polarity
and liver disease. Journal of hepatology.
Fuente: Eynard, A. R., Valentich, M. A., & Rovasio, R. A. (2008). Histología y embriología
del ser humano: bases celulares y moleculares. Ed. Médica Panamericana.
XIV. Páncreas
El páncreas es una glándula alargada en la que se describe una cabeza, un cuerpo y una
cola. La cabeza es una porción expandida que está ubicada en la curva con forma de C
que describe el duodeno. Está unida al duodeno por tejido conjuntivo.
El páncreas es una glándula exocrina y endocrina.
A diferencia del hígado, en el que las funciones exocrina y endocrina se realizan en la
misma célula, la función doble del páncreas está repartida entre dos componentes
estructurales distintos. (Eynard, 2008)
secretoras glandulares porque el Texto y atlas color con biología celular y molecular.
Ed. Médica Panamericana.
conducto inicial que parte del ácino, o
sea el conducto intercalar, en realidad comienza dentro del adenómero mismo. Las células
del conducto que están dentro del ácino reciben el nombre de células centroacinosas.
Las células de los ácinos se caracterizan por una basofilia bien definida en el citoplasma
basal y por gránulos de cimógeno acidófilos en su citoplasma apical. Los gránulos de
cimógeno son muy abundantes en el páncreas de las personas que están en ayuno. Las
células centroacinosas aplanadas carecen de ergastoplasma y de gránulos de secreción,
por lo que se tiñen muy pálidamente con la eosina. (Ross, 2012)
7 Diseño de investigacion
8 Discusión
9 Conclusión
10 Bibliografía
Arias, I. M. (2015). Structural and functional hepatocyte polarity and liver disease. Science
Direct, 8-9.
Eynard, A. R. (2008). Histología y embriología del ser humano: bases celulares y
moleculares. Buenos Aires: Medica Panamericana.
Fox, S. I. (2016). Fisiología humana. McGraw-Hill.
Fritsch, H. F. (2008). Atlas de anatomía: con correlación clínica. Médica Panamericana.
Hall, J. E. (2017). Guyton e Hall tratado de fisiologia médica. Elsevier Brasil.
Ross, M. H. (2012). Texto y atlas color con biología celular y molecular. Buenos Aires:
Médica Panamericana.
Sabotta, & Welsch. (2008). Histologia. Alemania: Medica Panamericana.
Sobotta, J. (2006). Atlas de anatomia humana (Vol. 2). Médica Panamericana.
11 Anexos
11.1 Cronograma
Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre
Semana Semana Semana Semana Semana Semana
1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4
Formulación del
problema
Justificación
Viabilidad y
PRESENTAN
Factibilidad del
estudio
Laura
Propósito
Melissa
Objetivos Zarate
Antecedente
Stephanie