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ÁREA JURÍDICA * La responsabilidad patrimonial solidaria del

delegante en la Contratación Estatal

Delegant’s supportive La responsabilidad


patrimonial liability in patrimonial solidaria
State hiring del delegante en la
Contratación Estatal*
Fecha de recepción: Abril 27 de 2010

Fecha de aceptación: Junio 15 de 2010

Carlos Andrés Téllez Roncancio**

RESUMEN ABSTRACT

Este artículo estudia la figura de la delegación de fun- This article studies the figure of task delegation as well
ciones y la responsabilidad patrimonial del delegan- as the delegant and delegatee’s patrimonial liability in
te y el delegatario, en el campo de la contratación the field of State hiring, since they produce intentio-
estatal, por realizar conductas dolosas o gravemente nal or seriously culpable offenses that may affect the
culposas, que ocasionen daños en el desarrollo de la development of the task that has been delegated and
actividad deƒlegada que conlleven la responsabilidad that entails de State responsibility, especially due to
del Estado y en especial por el incumplimiento de the failure to comply with the delegant’s control and
los deberes de control y vigilancia del delegante en surveillance duties in the pre-contractual and con-
la actividad precontractual y contractual del Estado. tractual activity of the State.

Palabras clave
Delegación, Delegatario, Delegante,
Responsabilidad patrimonial, Solidaridad,
Contratación estatal.

Key words
* Artículo producto de investigación del proyecto denominado “La Delegation, Delegatee, Delegane,
responsabilidad patrimonial solidaria del Delegante en la contra-
tación estatal”. Patrimonial risponsibility solidarity,
** Abogado, egresado de la Fundación Universitaria Los Liberta- State hiring.
dores. Especialista en Derecho Administrativo de la Universi-
dad Santo Tomás (Bogotá). Joven Investigador de la Fundación
Universitaria Los Libertadores. Bogotá. Colombia. Contacto:
catr1946@yahoo.com.mx

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INTRODUCCIÓN nen el régimen de la responsabilidad del delegante y


donde se acogen tesis expuestas por el Consejo de Es-
La Constitución Política de 1991 trajo consigo una tado sobre esta materia, en especial los planteamien-
nueva forma de observar y desarrollar la figura de tos de la Sección Tercera del Máximo Tribunal de lo
la delegación de funciones y la responsabilidad de Contencioso Administrativo plasmados en la Senten-
quienes intervienen en dicha figura: el delegante y cia del 31 de octubre 2007, Expediente 13503, Con-
el delegatario. sejero ponente, Mauricio Fajardo Gómez.

Según el artículo 211 de la Constitución, desarrollado Los tratadistas nacionales, a pesar de la importancia
por el artículo 12 de la Ley 489 de 1998, la delega- y del mal uso que se ha venido dando por algunos
ción exime de responsabilidad al delegante, es decir, funcionarios públicos a la figura de la delegación,
que solo el delegatario responde por los daños o per- han abordado el tema desde un punto de vista le-
juicios ocasionados con el desarrollo de la actividad gal y jurisprudencial para exponer su estructura y
delegada, salvo el caso de la delegación de firma en configuración, pero sin dar mayores explicaciones
materia contractual por la cual responde exclusiva- sobre el significado y el por qué del régimen de res-
mente el delegante. ponsabilidades que esa figura de transferencia de
funciones conlleva.
Sin embargo, el parágrafo 4 del artículo 2 de la Ley
678 de 2001 amplió el margen de responsabilidad Más exactamente: se ha guardado silencio respecto
al establecer que en materia contractual los actos de al por qué la culpa in vigilando es considerada como
delegación no eximen de responsabilidad al delegan- una conducta dolosa o gravemente culposa que con-
te, quien responde solidariamente con el delegatario, lleva una responsabilidad patrimonial solidaria de los
es decir, que en materia contractual tanto el delegan- dos sujetos intervinientes de la delegación en materia
te como el delegatario pueden ser responsables patri- contractual, cuando se ha ocasionado un daño anti-
monialmente frente al Estado por realizar conductas jurídico a un particular y éste al demandar al Estado
dolosas o gravemente culposas que ocasionen daños ha obtenido una sentencia favorable a sus pretensio-
mientras se adelanta la actividad delegada. nes indemnizatorias, obligando al Estado a repetir
contra el delegante para obtener el restablecimiento
Más tarde, en el año 2007, el Congreso de la Repú- del erario.
blica expidió la Ley 1150, por medio de la cual se
introducen medidas para la eficiencia y la transparen- Es por esto que con este artículo me he propuesto
cia en la Ley 80 de 1993 y se dictan otras disposicio- resolver el siguiente problema: ¿por qué la culpa in
nes generales sobre la contratación con recursos pú- vigilando es considerada como una conducta dolosa
blicos, y en su artículo 21, referente a la delegación y o gravemente culposa que conlleva la responsabili-
la desconcentración para contratar, introdujo un inci- dad patrimonial solidaria del delegante en materia
so segundo al artículo 12 de la Ley 80 de 1993 que contractual?, ello con el fin de determinar el por qué
establece: “En ningún caso, los jefes y representantes es tomado el incumplimiento del delegante de su
legales de las entidades estatales quedarán exonera- deber de controlar y vigilar los actos del delegatario
dos por virtud de la delegación de sus deberes de como una conducta gravemente culposa o dolosa
control y vigilancia de la actividad precontractual y que le conlleva ser responsable solidario patrimo-
contractual” (Congreso Nacional de la República, nialmente con éste en acción de repetición o llama-
2007, artículo 21). miento en garantía.

Dicha norma fue declarada condicionalmente exe- Con este fin se analizará el tratamiento que el orde-
quible por la Corte Constitucional en el entendido namiento jurídico da al tema de la delegación y de
“según el cual el delegante solo responderá del recto la responsabilidad patrimonial solidaria del delegante
ejercicio de sus deberes de control y vigilancia de la en materia contractual, y se establecerá la responsa-
actividad precontractual y contractual, cuando haya bilidad del delegante por el incumplimiento de sus
incurrido en dolo o culpa grave en el ejercicio de deberes de control y vigilancia sobre el delegatario
dichas funciones” (Corte Constitucional, C-693-08, como conducta dolosa o gravemente culposa.
Resuelve), siendo este pronunciamiento el último de
una serie de fallos del mismo Tribunal Constitucional Para desarrollar estos objetivos en la primera parte del
donde se declaran exequibles las normas que contie- artículo se abordará el marco constitucional y legal de

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la delegación y de la responsabilidad del delegante, ridades administrativas deben dar aplicación a “uno
en la segunda parte se tratará la responsabilidad pa- de los principios rectores del ejercicio de la compe-
trimonial solidaria del delegante en materia contrac- tencia” (Henao, 2000, p. 10), esto es la coordinación,
tual, en la tercera parte se hará referencia a la respon- consistente en coordinar sus actuaciones para el ade-
sabilidad del delegante por el incumplimiento de sus cuado cumplimiento de los fines del Estado Social de
deberes de control y vigilancia sobre el delegatario, Derecho (Art. 209 C.N.).
en una cuarta parte se estudiará el incumplimiento
de los deberes de inspección y vigilancia como una En cuanto a esta modalidad de transferencia del ejer-
conducta dolosa o gravemente culposa del delegante cicio de funciones, la Constitución de 1991 radicó
y, por último, se darán algunas conclusiones. en el Legislador la atribución de fijar las condiciones
para que las autoridades administrativas pudieran
MARCO CONSTITUCIONAL Y delegar en sus subalternos o en otras autoridades y
LEGAL DE LA DELEGACIÓN Y DE LA determinara los recursos procedentes contra los actos
RESPONSABILIDAD DEL DELEGANTE del delegatario (Art. 211 C.N.).

El Constituyente de 1991 consagró a la República de En materia de responsabilidad eximió de ésta al de-


Colombia como un Estado Social de Derecho (Art. 1 legante, y la radicó exclusivamente en el delegatario,
C.N.) dotándolo de una serie de autoridades para que dejando en claro que los actos del delegatario podrían
lograra asegurar el cumplimiento de los deberes socia- ser reformados o revocados por el delegante, caso en
les que la misma Carta Política le impone y, de contera, el cual reasumiría la responsabilidad (Art. 211 C.N.).
de los deberes de los particulares (Art. 2 C.N.).
La anteriores disposiciones constitucionales fueron
Estas autoridades fueron denominadas en la Carta desarrolladas por el Órgano Legislativo mediante las
Política genéricamente como servidores públicos, de- Leyes 80 de 1993, 489 de 1998, 678 de 2001 y 1150
finidos como “aquellas personas naturales que pres- de 2007, sobre las cuales me referiré siguiendo el or-
tan sus servicios al Estado mediante una vinculación den cronológico de su expedición.
jurídica” (Pérez, 2004, p. 436), y los hizo responsa-
bles por infringir la Constitución y la ley tanto por la a. El primer desarrollo legal del marco constitucional
omisión como por la extralimitación en el ejercicio establecido por la Carta de 1991 fue la Ley 80 del
de sus funciones (Art. 6 C.N.). 2 de octubre de 1993, con la cual se expidió el
Estatuto General de Contratación de la Adminis-
Para hacer efectiva esa responsabilidad se estableció tración Pública y que tiene por objeto establecer
que la Constitución, la ley y el reglamento les atri- las reglas y los principios que debían regir los con-
buyeran unas funciones expresas a esos servidores tratos de las entidades estatales (Art. 1).
públicos, dejándolos al servicio del Estado y de la
comunidad, facultando al Congreso de la República En el artículo 12 de la mencionada Ley y en con-
para que determinara su responsabilidad y la manera cordancia con el artículo 2, numeral 2, literal a)
de hacerla efectiva (Arts. 121 a 124 C.N.). de la misma, se reguló lo concerniente a la dele-
gación en materia contractual, disposiciones que
Además, estableció que el Estado debía responder pa- posteriormente fueron desarrolladas por el artículo
trimonialmente por los daños antijurídicos que le fueran 14 del Decreto 679 del 28 de marzo de 1994, per-
imputables, causados por las acciones o las omisiones mitiendo a los jefes y representantes legales de las
de las autoridades públicas, imponiéndole el derecho y entidades estatales delegar total o parcialmente la
el deber de repetir contra ese funcionario público que competencia para celebrar contratos en los servi-
con su conducta dolosa o gravemente culposa propició dores públicos que desempeñen cargos del nivel
la condena del Ente Estatal (Art. 90 C.N.). directivo, asesor y ejecutivo o en sus equivalentes.

Por otro lado, autorizó al Congreso para expedir el Además, la Ley 80 de 1993 consagró en su artí-
Estatuto General de Contratación de la Administra- culo 26 el principio de responsabilidad, en virtud
ción Pública (Art. 150 C.N.) y dispuso que la fun- del cual se dispuso que los servidores públicos
ción administrativa debía estar al servicio del interés responderían por sus actuaciones y omisiones an-
general, la cual podría ser desarrollada, entre otras tijurídicas conllevándoles el deber de indemnizar
modalidades, mediante la delegación donde las auto- los daños que se llegaran a causar con ocasión

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de dichas actuaciones (Art. 26, num. 2) y que la En materia de responsabilidades transcribió el artí-
responsabilidad derivada de la dirección y el ma- culo 211 superior y eximió de manera genérica al
nejo de la actividad contractual y de los procesos delegante, la cual correspondería exclusivamente
de selección sería del jefe o representante de la al delegatario, sin perjuicio de que el delegante
entidad estatal, quien no podría trasladarla a las pueda en cualquier tiempo reasumir la competen-
juntas o consejos directivos de la entidad, ni a las cia y revisar los actos expedidos por el delegatario,
corporaciones de elección popular, a los comités con observancia de las disposiciones del Código
asesores, ni a los organismos de control y vigilan- Contencioso Administrativo, pero también estable-
cia de la misma (Art. 26, num. 5). ció que en materia de contratación, el acto de la
firma expresamente delegada, no eximiría de res-
b. Posteriormente sería expedida la Ley 489 del 29 ponsabilidad civil y penal al delegante.
de diciembre de 1998, cuyo artículo 3 establece-
ría la responsabilidad, en el sentido constitucional Por último, consagró que los actos expedidos por
anotado, como principio de la función adminis- las autoridades delegatarias estarían sometidos a
trativa. De igual manera definiría el régimen de la los mismos requisitos de expedición y recursos de
delegación en nuestro país en sus artículos 9 a 14, impugnación establecidos por el ordenamiento
en los cuales dispuso que mediante un acto ad- jurídico para el delegante.
ministrativo de delegación, una autoridad podría
transferir el ejercicio de funciones a sus colabo- c. El 3 de agosto de 2001 el Legislador expidió la
radores o a otras autoridades, siempre que éstas Ley 678 con la cual se reglamentó lo referente a
tuvieran funciones afines o complementarias. la responsabilidad patrimonial de los agentes del
Estado a través del ejercicio de la acción de repe-
También dejó en claro este catálogo normativo tición o del llamamiento en garantía con fines de
que sin perjuicio de las delegaciones previstas en repetición. En su artículo 2, parágrafo 4, estatuyó
las leyes orgánicas, los ministros, directores de que en materia contractual el acto de la delega-
departamento administrativo, superintendentes, ción no eximiría de responsabilidad patrimonial
representantes legales de organismos y entida- al delegante, quien podría ser llamado a respon-
des que ostentaran una estructura independien- der solidariamente junto con el delegatario.
te y una autonomía administrativa, podrían de-
legar la atención y decisión de sus asuntos en Además, en su artículo 5 dejó definidas las con-
los empleados públicos de los niveles directivo y ductas dolosas desde un punto de vista “adminis-
asesor vinculados al organismo correspondiente. trativista” (Lafont Pianeta, 2003, p. 942) señalan-
do que eran aquellas conductas en las cuales un
Para poner en práctica la figura de la delega- agente estatal quiere la realización de un hecho
ción se estableció que esta debería realizarse ajeno a las finalidades del servicio del Estado.
a través de un acto escrito, determinándose
la autoridad delegataria y las funciones o los La Ley 678 de 2001 presumió o calificó (Betan-
asuntos específicos que se transfirieran y esta- cur, 2009) conductas dolosas en los siguientes ca-
bleció para el delegante el deber de informar- sos: 1) cuando se obra con desviación de poder,
se en todo momento sobre el desarrollo de las 2) cuando se expide un acto administrativo con
delegaciones que haya concedido e impartir vicios en su motivación por inexistencia del su-
las orientaciones generales necesarias sobre el puesto de hecho de la decisión adoptada o de la
ejercicio de esas funciones delegadas. norma que le sirve de fundamento, 3) cuando se
expide un acto administrativo con falsa motiva-
También consagró una lista enunciativa de las ción por desviación de la realidad u ocultamiento
actividades que no podrían ser objeto de esta de los hechos que sirven de sustento a la decisión
modalidad administrativa como la expedición de de la administración, 4) cuando se es penal o dis-
reglamentos de carácter general, salvo casos lega- ciplinariamente responsable a título de dolo por
les y expresamente autorizados, la subdelegación los mismos daños que sirvieron de fundamento
y las funciones que por su naturaleza o por man- para la responsabilidad patrimonial del Estado y
dato constitucional o legal no sean susceptibles 5) cuando se expide una resolución, un auto o
de delegación. una sentencia manifiestamente contraria a dere-
cho en un proceso judicial.

Carlos Andrés Téllez Roncancio


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De la misma manera como lo hizo con el dolo, d. El último desarrollo legal se produjo con la ex-
el Congreso de la República en el artículo 6 de la pedición de la Ley 1150 del 16 de julio de 2007
Ley bajo estudio definió las conductas gravemen- con la cual el Congreso introdujo medidas para
te culposas como aquellas en las que el daño es la eficiencia y la transparencia en la Ley 80 de
consecuencia de una infracción directa a la Cons- 1993 y dictó disposiciones generales sobre la
titución o a la ley o de una inexcusable omisión o contratación con recursos públicos.
extralimitación del ejercicio de las funciones del
agente estatal. En el artículo 21 de esta Ley se reguló y modi-
ficó lo concerniente a la delegación en materia
De igual manera estableció como presunciones contractual introduciendo un segundo inciso y un
de ese tipo de conductas o señaló (Betancur, parágrafo al artículo 12 de la Ley 80 y en el que
2009) como conductas gravemente culposas, las dispuso que en ningún caso, los jefes y represen-
siguientes situaciones: 1) cuando hay violación tantes legales de las entidades estatales quedaban
manifiesta e inexcusable de las normas de de- exonerados por virtud de la delegación de sus de-
recho, 2) cuando hay carencia o abuso de com- beres de control y vigilancia en la actividad pre-
petencia para proferir una decisión anulada, de- contractual y contractual, la cual fue declarada
terminada por error inexcusable, 3) cuando hay condicionalmente exequible por la Corte Cons-
omisión de las formas sustanciales o de la esencia titucional (C-693/08) en el entendido de que el
para la validez de los actos administrativos deter- delegante respondería por el recto ejercicio de
minada por error inexcusable y 4) cuando se viola sus deberes de control y vigilancia, cuando incu-
el debido proceso en detenciones arbitrarias y en rriera en dolo o culpa grave en el cumplimiento
la dilatación de los términos procesales con de- de dicho deber.
tención física o corporal.
Del anterior catálogo normativo se pueden ob-
Sin embargo, los anteriores catálogos de presun- servar algunas características de la figura de la
ciones de conductas constitutivas de dolo y cul- delegación, desarrolladas por la jurisprudencia
pa grave de los artículos 5 y 6 de la Ley 678 de (Consejo de Estado, 2009, agosto; Consejo de
2001, se caracterizan, según Henao (2006), por Estado, 2009, marzo; Consejo de Estado, 2008,
ser iuris tantum o admitir prueba en contrario y julio; Consejo de Estado, 2007; Consejo de Esta-
por no contener una enumeración taxativa, sino do, 2003; Corte Constitucional, T-024-96; Corte
meramente enunciativa dejando un campo de Constitucional, C-561-99; Corte Constitucional,
interpretación al juzgador en los casos concretos C-382-00; Corte Constitucional, T-936-01; Cor-
posibilitando que otras conductas encajen en las te Constitucional, C-372-02) y por la doctrina
definiciones dadas por el Legislador del 2001, tal (Lamprea, 2007, p. 166; Chávez, 2005, p. 76;
y como lo ha dejado entrever la Corte Constitu- Berrocal, 2005, p. 57; Rodríguez, 2005, p. 54;
cional (C-455-02): Solano, 2000, p. 177; Hernández, 1999, p. 187;
Gordillo, 2003, p. XII-16; Gómez, 2004, p. 109;
Debe advertirse que las presunciones contem- Benavides, 2004, p. 171; Dormí, 2004, p. 364),
pladas en los numerales 5 y 6 de la ley 678 no las mismas son generales al estar presentes en
son las únicas de las cuales pueden deducirse cualquier campo de la función administrativa en
las conductas dolosas o culposas de los agentes que se de aplicación a esta figura, aunque en
estatales. En otros términos, el juez de la causa materia contractual, campo en el cual se centra
es libre de apreciar comportamientos dolosos este artículo, goza de ciertas particularidades de
o culposos en otras conductas no mencionadas las que haré mención en su momento.
en dichos numerales. Así, en la medida en que
dicha lista no limita al juez encargado de resol- De esta manera la primera característica de la
ver la acción de repetición, el hecho que el ré- delegación que se puede observar es el carácter
gimen de presunciones se presente de manera expreso y detallado de las funciones que van a
individualizada no influye en la determinación ser objeto de la delegación, siendo improcedente
de la responsabilidad patrimonial del sujeto como lo manifiesta la Corte Constitucional una
accionado (fundamento 5). “delegación genérica” (Corte Constitucional,
C-398-95).

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Otra característica consiste en el acto formal que celebración del contrato y los actos de interpreta-
debe expedirse para realizar la delegación, es ción, modificación, terminación, liquidación, adi-
decir, el acto administrativo de delegación en el ción y prórroga de los contratos estatales.
cual se debe establecer la autoridad delegante, la
autoridad delegataria y las condiciones de tiem- Una última característica es la relacionada con la
po, modo, lugar y, para el ámbito contractual, el responsabilidad de los sujetos intervinientes en
objeto especifico del contrato a celebrarse (Ángel, esta modalidad administrativa, es decir, del de-
2002), siendo viable tan solo una “interpretación legante y del delegatario, pero que al ser el eje
restrictiva” (Solano, 2000, p. 281) de este acto. central de este artículo he decidido abordarla en
la siguiente parte.
Una nueva característica es la existencia de un
acto de autorización, el cual se hace indispensable LA RESPONSABILIDAD PATRIMONIAL
para poner en práctica la figura de la delegación, SOLIDARIA DEL DELEGANTE EN
consistiendo en que las condiciones y las funcio- MATERIA CONTRACTUAL
nes que pueden ser objeto de la delegación deben
estar permitidas y determinadas por un acto del Como se señaló anteriormente la responsabilidad es
Órgano Legislativo o de una corporación o autori- una característica propia de la delegación de funcio-
dad administrativa. nes, pero en el ordenamiento jurídico colombiano no
ha sido fácil de asimilar por la doctrina, aunque la
La figura de la avocación es otra de las caracte- jurisprudencia ha hecho que este tópico sea más ma-
rísticas de la delegación y consiste en que el de- leable con el fin de facilitar su aplicación en la prác-
legante puede en cualquier momento reasumir o tica contractual y, por ello, no es un tema que deba
revocar la competencia delegada para sí, motivo abordarse a la ligera.
por lo cual también es de carácter “transitoria”
(Consejo de Estado, 1998, Radicación 1089, Fun- Es por esto que he escogido tratar el tema de la res-
damento I; Consejo de Estado, 2003, Radicación ponsabilidad en una sección especial del artículo
25000-23-24-000-2000-00548-01, Cap. V). para una mayor claridad y, en aras de ello, parto por
decir que la responsabilidad a la que haré referencia
En cuanto a los sujetos intervinientes de la de- debe ser entendida en el sentido del deber que tiene
legación, de manera general se ha manifestado una persona, en este caso el delegante, de asumir las
que estos son los autorizados legalmente para ello consecuencias de un acto o un hecho propio.
y en materia contractual la calidad de autoridad
delegante se ha radicado en el jefe o el represen- Con base en lo anterior y al ser la delegación un me-
tante legal de la entidad estatal, permitiéndosele canismo de transferencia de funciones y más exacta-
que delegue total o parcialmente sus competen- mente de la competencia que se ostenta para ejer-
cias contractuales en un delegatario subordinado cerlas, la responsabilidad en materia de delegación
de la misma entidad estatal, quien debe ser un en un principio, y como lo ha consagrado tanto la
funcionario que ocupe un cargo en los niveles di- Constitución como la Ley 489 de 1998, recae exclusi-
rectivos y ejecutivos. vamente en el sujeto que se encuentra desarrollando
la función objeto de delegación (Rodríguez, 2007).
El jefe o el representante legal de la entidad a pesar
de tener la autorización legal para delegar, goza Por esto, es imposible aceptar que la responsabili-
de un amplio margen de discrecionalidad para de- dad derivada de los procedimientos contractuales
cidir si delega o no, así como del momento para compete en forma exclusiva al representante de la
hacerlo, salvo que el órgano, corporación o auto- entidad estatal como lo manifiesta Lamprea (2007),
ridad que expide el acto de autorización haya im- puesto que mientras el jefe o el representante legal
puesto un término para hacer uso de esa facultad. de la entidad estatal ostenta su competencia de ade-
lantar procesos contractuales, la responsabilidad de-
En el campo contractual las competencias delega- rivada de la misma radica exclusivamente en él, pero
bles o susceptibles de ser delegadas son las faculta- cuando decide trasladar dicha competencia a uno de
des para ordenar y dirigir licitaciones o concursos, sus subordinados a través de un acto administrativo
el acto de adjudicación, la dirección de la audien- de delegación, traslada tanto la competencia como la
cia de aclaración de los pliegos de condiciones, la responsabilidad, radicándola en el delegatario.

Carlos Andrés Téllez Roncancio


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De lo anterior se puede deducir que existe una regla ge- c. Pasando a una tercera excepción el Procurador
neral en la delegación de funciones en cuanto a la res- General de la Nación dentro de la demanda de
ponsabilidad que le genera a sus intervinientes, según la inconstitucionalidad incoada contra el parágrafo 4
cual, únicamente será responsable el delegatario al ser del artículo 2 de la Ley 678 de 2001, Sentencia
el sujeto que desarrolla la competencia delegada (Ro- C-372 de 2002, y, por otro lado, De Lafont Pianeta
dríguez, 2007). Sin embargo, esta regla general admite (2003) dejaron en evidencia que la realización de
excepciones las cuales no solo están consagradas legal- una delegación parcial haría que la responsabilidad
mente, sino que devienen de la misma Constitución. no se radicara exclusivamente en el delegatario sino
que estuviera en cabeza de los dos sujetos intervi-
a. La primera excepción a la regla general señalada nientes de la delegación de una manera solidaria.
se deriva del artículo 12 de la Ley 489 y consiste
en la avocación que haga el delegante de la com- Esta excepción encuentra su fundamento en que el
petencia delegada, es decir, cuando éste reasume delegante al no desprenderse completamente de
la competencia que ha delegado y, por ende, la sus competencias conserva cierto grado de gestión
responsabilidad derivada del ejercicio de la mis- sobre la misma, con lo cual comparte el ejercicio de
ma, según las razones expuestas anteriormente. la función y, por ende, la responsabilidad derivada
del ejercicio de la misma con el delegatario.
b. Una segunda excepción es la contenida en el artí-
culo 211 Superior y que consiste en la revocación De otro lado, lo que pudo haber sido una cuarta
que realice el delegante del acto de delegación o excepción a la regla general de que la responsa-
de los actos proferidos por el delegatario en el de- bilidad en la delegación recae exclusivamente en
sarrollo de la misma y de la reforma de los actos el delegatario fue la circunstancia expuesta por
expedidos por el delegatario en el ejercicio de la Hernández (1999) y Benavides (2004) según la
función objeto de delegación, actividades con las cual el delegante sería responsable por el hecho
cuales esta “reasumiendo la responsabilidad con- de delegar funciones contractuales en funciona-
siguiente” (C.P, Art. 211), según los términos de la rios diferentes a los autorizados por la ley.
Ley Fundamental.
Sin embargo, la Corte Constitucional (C-372-02) ha
Esta excepción, además del origen constitucional dejado cerradas las puertas a la posibilidad de que
señalado, tiene un desarrollo legal que trae una el delegante fuera responsable por el solo hecho de
nueva arista en la regulación general de la figu- haber delegado funciones contractuales a empleados
ra de la delegación y que deviene de la Ley 489 públicos diferentes a aquellos que ocupan cargos en
de 1998, la cual impuso al delegante el deber de los niveles directivos y ejecutivos de la entidad, en
controlar o vigilar al delegatario, impartiéndole aras de salvaguardar los principios consagrados en el
orientaciones generales para el correcto ejercicio artículo 209 Superior considerando que:
de las funciones delegadas.
Si bien la titularidad de la contratación es-
Esta regulación condujo a que a nivel jurispru- tatal ha sido radicada por el legislador en el
dencial, aunque un sector de la doctrina ya lo jefe o representante legal de la entidad, esta
había señalado, se hablara de la existencia de circunstancia no excluye que, por la natura-
un “vínculo permanente” (Hernández, 1999, p. leza y el nivel del empleo y por el tipo de
205; Lamprea, 2007, p. 166; Corte Constitucio- atribuciones a cargo de este funcionario, pue-
nal, C-372-02, Fundamento 8; Consejo de Esta- da él, cuando lo estime procedente para dar
do, 2005, Segunda acusación; Consejo de Esta- cumplimiento a los principios de la función
do, 2008, marzo, Considerando 3.3) y “especial” administrativa, vincular a otros funcionarios
(Consejo de Estado, 2008, marzo, Considerando de la entidad para que participen también
3.3) entre el delegante y el delegatario que sub- en la gestión contractual del Estado. Con tal
siste mientras el acto de delegación permanece finalidad, el jefe o representante legal dispo-
vigente y que le permite ejercer al primero de un ne de instrumentos de gestión a los cuales
poder permanente de instrucción o de orienta- puede acudir, entre ellos a la delegación total
ción sobre el segundo para producir una mayor o parcial de sus competencias para celebrar
eficacia en la gestión delegada, pero de este de- contratos en servidores públicos de la entidad
ber se hablará en la tercera parte del artículo. (Fundamento 7).

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Claro está que en este último evento no se deja exi- grave en la realización de la misma o el supuesto de
mido totalmente al delegante de responsabilidad, hecho de alguna de las presunciones contenidas en
puesto que aún se puede predicar la misma cuando la Ley 678 de 2001 estudiadas en la parte anterior
al delegar sus funciones contractuales en cualquier de este artículo (Corte Constitucional, C-374-02), la
empleado de la entidad se configure una de las ex- existencia del daño ocasionado, y la relación de cau-
cepciones expuestas anteriormente. salidad entre éste y la conducta dolosa o gravemente
culposa del funcionario público.
d. Una cuarta excepción a la regla general mencio-
nada, aunque no es de aplicación general como Respecto a esta clase de responsabilidad, el ordena-
las anteriores al estar especialmente circunscrita a miento jurídico ha consagrado un tratamiento espe-
la contratación estatal, es el acto de firma expre- cial en el ámbito de la delegación en contratación
samente delegada. estatal, el cual fue concebido con un campo de ac-
ción bastante restringido al haberse circunscrito en el
Este especie de delegación se caracteriza por no parágrafo del artículo 12 de la Ley 489 de 1998 a la
eximir de responsabilidad al delegante, puesto “pseudo delegación” (Chávez, 2005, p. 81).
que no conlleva la transferencia de competencias
típica de toda delegación sino la mera asignación Como se mencionó, esta especie de delegación cons-
de una tarea, la cual se materializa con la simple tituye una cuarta excepción a la regla general men-
suscripción de un documento (Corte Constitucio- cionada que no es de aplicación general como las
nal, C-727-00) sin conllevar el natural traspaso de otras tres excepciones al estar circunscrita a la con-
competencias y de responsabilidades las cuales tratación estatal.
siguen en cabeza del delegante de firma. Esta ex-
cepción se tratará más adelante con detenimiento. Sin embargo, con la Ley 678 de 2001 se ampliaría
dicha excepción, al establecerse el carácter solida-
La responsabilidad a la que he venido haciendo refe- rio de la responsabilidad patrimonial derivada ya
rencia se caracteriza por ser “plena” (Lamprea, 2007, no del acto de firma expresamente delegada sino
p. 45), es decir, que puede ser de carácter penal, dis- de todo acto de delegación en materia contractual
ciplinaria, fiscal y civil o patrimonial, según la conducta conllevando a que el jefe o representante legal de la
que haya realizado el delegante y la infracción que con entidad estatal, junto con el delegatario, compartan
ocasión de la misma haya cometido, lo cual encuentra responsabilidades por sus actuaciones dolosas o gra-
sustento jurídico en el artículo 51 de la Ley 80 de 1993. vemente culposas.

La última de las responsabilidades enunciadas tiene Una interpretación aislada de esta disposición legal
su fundamento constitucional en la segunda parte podría llegar a hacer creer que el delegante sería res-
del artículo 90 de la Ley Fundamental, el cual con- ponsable no solo por sus conductas dolosas o gra-
sagra una responsabilidad de corte subjetivo (Henao, vemente culposas, sino también por las conductas
2006; De Lafont Pianeta, 2003) en materia de acción dolosas o gravemente culposas del delegatario en un
de repetición. sentido estricto.

El objeto de la acción de repetición es resarcir el era- Sin embargo, la realidad es otra cuando la anterior
rio público en caso de haberse visto afectado por la disposición es confrontada con el ordenamiento ju-
cancelación de una obligación indemnizatoria de ori- rídico en su conjunto y se encuentra con el principio
gen judicial o extrajudicial por parte del Estado, con de la responsabilidad subjetiva contenido en la se-
el fin de reparar un daño antijurídico sufrido por un gunda parte del artículo 90 Constitucional, y es en
particular o una entidad estatal, siempre y cuando aras de la protección de dicho principio, y por una
haya estado mediado por una conducta dolosa o gra- correcta interpretación de la Ley 678 de 2001, que
vemente culposa de uno de sus agentes. la Honorable Corte Constitucional (C-372-02) dejó
en claro que la responsabilidad patrimonial del de-
Como consecuencia del tipo subjetivo de responsa- legante se presenta según su grado de participación
bilidad que rige, se desprende que la configuración en el hecho.
de la responsabilidad patrimonial necesita de la iden-
tificación clara de una conducta propia del agente Por tal motivo, esta cuarta excepción se materializa,
estatal, que se haya comprobado el dolo o la culpa además de la delegación de firma, en otras tres si-

Carlos Andrés Téllez Roncancio


ÁREA JURÍDICA * La responsabilidad patrimonial solidaria del
delegante en la Contratación Estatal

tuaciones, a saber: la primera, cuando haya actuado Pero para seguir con la línea de argumentación que
con dolo o culpa grave utilizando al delegatario como desarrollé en la segunda parte de este artículo, se
un mero instrumento de su conducta ocasionando un puede afirmar que el incumplimiento de los jefes
daño durante el desarrollo de las funciones delega- y representantes legales de las entidades estatales
das; la segunda, cuando se presenta un concurso de de sus deberes de control y vigilancia, dentro de los
conductas de carácter doloso y gravemente culposo cuales hacen parte la dirección y el manejo de la
provenientes de delegante y del delegatario en la actividad contractual de la entidad, es una quinta
producción del daño durante la gestión de la com- excepción a la regla general que pone de presente
petencia delegada, y la tercera, la cual se deriva de la como en la delegación la responsabilidad recae ex-
exequibilidad condicionada del parágrafo cuarto del clusivamente en el delegatario cuando se habla de
artículo 2 de la Ley 678, cuando el delegante actúe adelantar procesos contractuales.
con dolo o culpa en el ejercicio de sus funciones oca-
sionando un daño. Según el inciso segundo del artículo 21 de la referi-
da Ley: “En ningún caso, los jefes y representantes
Para cerrar esta segunda parte del artículo es necesa- legales de las entidades estatales quedarán exone-
rio señalar que el tratamiento dado a la responsabi- rados por virtud de la delegación de sus deberes de
lidad patrimonial derivada de la delegación contrac- control y vigilancia de la actividad precontractual y
tual ha cobijado, además de las cuatro excepciones contractual” (Congreso Nacional de la República,
anteriormente señaladas, otra excepción a partir de 2007, artículo 21).
la expedición de la Ley 1150 de 2007, cuyo artículo
21, inciso segundo, estableció que los jefes y repre- A partir de esta disposición legal se colige que los “de-
sentantes legales de las entidades estatales no quedan beres de control y vigilancia” (Congreso Nacional de
exonerados de sus deberes de control y vigilancia so- la República, 2007, artículo 21) son en todo momen-
bre los actos del delegatario. to de obligatoria observancia para los jefes y repre-
sentantes legales de las entidades estatales, incluso
Con esta nueva disposición se ha consagrado la cuando han delegado las competencias relacionadas
responsabilidad in vigilando del delegante en el con la realización de procesos de contratación, que
ámbito de la contratación estatal, la cual se expon- en un principio el ordenamiento jurídico ha radicado
drá en la siguiente parte del artículo como punto en ellos al ser los servidores públicos de más alta je-
central del mismo. rarquía en las entidades gubernamentales.

LA RESPONSABILIDAD DEL DELEGANTE Para entender el alcance total de la citada disposición


POR EL INCUMPLIMIENTO DE SUS es necesario empezar por indicar que los “deberes”
DEBERES DE CONTROL Y VIGILANCIA (Congreso Nacional de la República, 2007, artículo
SOBRE EL DELEGATARIO 21) a los que se hacen referencia en ella no son una
novedad en materia de responsabilidades ni mucho
Como se dijo en la primera parte y al final de la se- menos se puede hacer alusión a la norma de la Ley
gunda de este artículo, el Congreso de la República 1150 como una disposición que hace efectiva su apli-
expidió la Ley 1150 de 2007 con la cual se agregó cación, puesto que siempre han estado presentes en
una circunstancia en la que el delegante puede lle- el ordenamiento jurídico.
gar a ser responsable patrimonialmente en materia
contractual. Dicha circunstancia hace referencia al Se debe comenzar por señalar que los deberes alu-
incumplimiento de los deberes de controlar y vigilar didos fueron establecidos por la Constitución Política
los actos del delegatario. de 1991 en su artículo 211 y desarrollados por el Le-
gislador a través de las Leyes 80 de 1993 y 489 de
En este aspecto, la Ley, bajo estudio, lo que en reali- 1998, en las cuales no se limitó al simple desarrollo
dad hizo fue blindar el contenido del numeral 5 del legal de los mismos, sino que introdujo unos nuevos
artículo 26 de la Ley 80 de 1993, el cual había esta- en la normativa colombiana.
blecido que la responsabilidad derivada de la direc-
ción y el manejo de la actividad contractual y de los a. El primero de esos deberes a los que hace refe-
procesos de selección sería del jefe o representante rencia la Ley 1150 de 2007 es el contenido en el
de la entidad estatal, quien no podría trasladarla. artículo 10 del Estatuto Orgánico de la Adminis-
tración Pública y que hace referencia al impartir

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orientaciones generales al delegatario, el cual es anteriormente, es el jefe o representante legal de


una manifestación del poder de instrucción al que la entidad, y que está consagrado en al artículo
hice referencia con anterioridad y que se materia- 211 Superior, consiste en reformar los actos expe-
liza a través del acto administrativo de delegación didos por el delegatario, según lo dispuesto por el
o con mecanismos o decisiones posteriores que Código Contencioso Administrativo.
tomó el delegante, como lo sería la avocación.
d. Otro de los deberes es el consagrado en al artícu-
Sobre este deber es bueno tener en cuenta el alcance lo 211 de la Ley Fundamental, que hace referen-
que puede llegar a tener si se le da una aplicación co- cia a la revocación de los actos proferidos por el
rrecta y que plantea Ángel (2002) cuando señala que: delegatario para la cual hay que seguir las disposi-
ciones que el Código Contencioso Administrativo
El acto de delegación debe contemplar, ade- consagra para la revocatoria directa de los actos
más del objeto específico del contrato los ob- administrativos.
jetivos que pretende la entidad al celebrarlo,
objetivos que deben coincidir con los planes e. El artículo 10 de la Ley 489 de 1998 impone al
y programas de desarrollo pertinentes, según delegante el deber de informarse sobre el desa-
el orden territorial al cual pertenezca la enti- rrollo de la delegación, lo que implica llevar a
dad. Los objetivos así previstos deben servir cabo un control directo y permanente respecto
de base para el ejercicio del control que debe de la gestión adelantada por el delegatario para
ejercer el jefe de la entidad, o quien ha hecho percatarse de la presencia de irregularidades du-
la delegación (p. 711). rante el ejercicio de las funciones delegadas por
parte del delegatario.
Ese contenido del acto de delegación, al que hace re-
ferencia el autor citado, es de suma importancia en la f. Un deber más es el de reasumir la competencia
materia estudiada, puesto que de permitírsele al de- delegada, el cual fue establecido por el artículo
legante la fijación de ese contenido a su voluntad o 12 de la Ley 489 y hace referencia a la avoca-
conveniencia, la delegación no tendría razón de ser, si ción tratada en la primera parte de este artículo y
se tiene en cuenta que esta modalidad de la función que es procedente en todo momento, pero sobre
administrativa debe estar al servicio del interés gene- todo en aquellos casos en que resulta necesario
ral y siempre debe ser ejercida con observancia de los reasumir las funciones delegadas después de que
principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, el delegante advierta que el delegatario ha incu-
celeridad, imparcialidad y publicidad (Art. 209, C.N.). rrido o puede llegar a incurrir en irregularidades
durante el desarrollo de las funciones delegadas.
Es por esos mismos principios que considero acer-
tado que esas instrucciones u orientaciones tengan g. El último de los deberes es el consagrado en el
como base los planes de desarrollo de la entidad y numeral 5 del artículo 26 de la Ley 80 de 1993 y
del sector a que se encuentre adscrita o vinculada consiste en dirigir y manejar la actividad contrac-
la misma, los cuales ya han sido adoptados tenien- tual y los procesos de selección cuya responsabi-
do en cuenta una serie de necesidades y objetivos a lidad es inherente a las competencias del Jefe o
alcanzar, en los que la contratación juega un papel representante legal de la entidad.
muy importante siendo el jefe o representante de la
entidad el primero en ser responsable por el alcance La disposición normativa del inciso segundo del artí-
de los mismos y la forma de hacerlo. culo 21 de la Ley en estudio ha evidenciado que los
anteriores deberes son una parte intrínseca de las fun-
b. Otro de los deberes es el consistente en revisar los ciones del cargo de jefe o representante legal de una
actos expedidos por el delegatario contenido en entidad estatal que jamás dejan de estar en cabeza
el artículo 211 de Carta Política y desarrollado por del funcionario que lo ocupe, a pesar de mediar un
el artículo 12 de la Ley 489, el cual se debe ejer- acto de delegación y en caso de no darse observan-
citar de acuerdo a las disposiciones de la primera cia a los mismos (Rodríguez, 2007) se puede llegar a
parte del Código Contencioso Administrativo. responder patrimonialmente frente al Estado por los
daños que éste se viera obligado a indemnizar como
c. Un tercer deber radicado en el delegante, que en consecuencia de las actividades del delegatario.
el caso de la contratación estatal, como mencioné

Carlos Andrés Téllez Roncancio


ÁREA JURÍDICA * La responsabilidad patrimonial solidaria del
delegante en la Contratación Estatal

Pero no se puede pasar por alto que la disposición respecto de la forma en que se ejecute la actividad
anotada fue objeto de una declaración condicionada precontractual o contractual delegada, sin que exista
de exequibilidad en el entendido de que “el delegan- dolo o culpa grave de su parte.
te solo responderá del recto ejercicio de sus deberes
de control y vigilancia de la actividad precontractual Un ejemplo de esto sería cuando las actuaciones
y contractual, cuando haya incurrido en dolo o cul- realizadas por el delegatario, en ejercicio de la fun-
pa grave en el ejercicio de dichas funciones” (Corte ción delegada, ocasionan un daño y están mediadas
Constitucional, C-693-08, Resuelve). por acciones u omisiones propias de carácter dolo-
so o gravemente culposo que impiden al delegante
Ello por cuanto la delegación conlleva un vínculo per- evitarlas mediante el despliegue de alguno de los
manente entre el delegante y el delegatario y que se deberes expuestos.
refleja precisamente en cada uno de los aludidos de-
beres, los cuales se ven reforzados con el principio de De aceptarse la responsabilidad del delegante en la
la “unidad de la administración” (Corte Constitucio- anterior circunstancia, también se debe aceptar que
nal, C-372-02, Fundamento 10; Consejo de Estado, cualquiera que sea la actuación que realice el dele-
2008, marzo, Considerando 3.3) que hace posible gatario su responsabilidad jamás se vería comprome-
impartir efectivamente políticas u orientaciones ge- tida y aquél respondería siempre por actos propios
nerales al delegatario para que conozca los planes, del delegatario, avalándose la responsabilidad objeti-
metas y programas institucionales permitiéndole que va en el campo de la responsabilidad patrimonial de
las plasme en sus actuaciones. los agentes estatales, lo que claramente está proscrito
del ordenamiento constitucional en el campo de la
Ese conocimiento por parte del delegatario sin lugar responsabilidad patrimonial, la cual está regida por el
a dudas es importante para que desarrolle eficiente- principio de la responsabilidad subjetiva de los agen-
mente la competencia delegada pero es mucho más tes estatales, como se observó anteriormente.
importante para el delegante, puesto que una correcta
planeación de la gestión contractual que se va a dele- Este fue otro de los fundamentos que contribuyó a
gar le permite posteriormente ejercer un pleno control la exequibilidad condicionada del inciso segundo del
sobre la actividad que va a realizar el delegatario. artículo 21 de la Ley 1150 de 2007, la cual conllevó
el establecimiento de una responsabilidad subjetiva
Además, una interpretación sistemática del artícu- de los servidores públicos en materia patrimonial,
lo 211 Superior con los artículos 1, 2, 6, 90, 123, mediada por sus propios actos u omisiones, según el
124 y 209 de la Constitución permite observar que grado de culpa o el dolo que medie en su actuar.
la delegación de ninguna manera exime totalmente
de responsabilidad al delegante, no se desprende de Otro de los fundamentos esgrimidos por el Tribunal
sus deberes de dirección, orientación, instrucción, Constitucional fue la consagración en el artículo 209
vigilancia y control sobre los actos del delegatario, Constitucional del principio de coordinación admi-
respondiendo por sus acciones u omisiones dolosas o nistrativa que implica la presencia de cierto grado de
gravemente culposas durante el ejercicio de este tipo jerarquía funcional entre las autoridades que ejercen
de actuaciones. funciones administrativas.

También se apoya esa exequibilidad en la interpreta- Este principio impone el deber al superior jerárquico
ción teleológica o histórica del mismo artículo 211 de de coordinar las labores que sus subordinados deben
la Ley de Leyes que nos conduce al fin preciso que ejecutar y que se materializa a través del uso adecua-
deseó el Constituyente de 1991 al impedir la separa- do de los mecanismos que el ordenamiento jurídico
ción completa de la titularidad de la función y de su ha puesto a su disposición, haciéndolo responsable
correspondiente responsabilidad, quedando radica- por la orientación, vigilancia y control que imparta
da tanto “en quien delega como en quien se delega” sobre sus subalternos.
(Ibáñez, 2007, p. 220).
Es oportuno anotar que este principio no desaparece
Es oportuno señalar que pueden ocurrir eventos en con el uso de la delegación de funciones si se tiene en
los que la omisión del delegante, en el cumplimien- cuenta que ésta se caracteriza por ser un “principio
to de los pluricitados deberes, esté supeditada a cir- organizacional” (Corte Constitucional, C-561-99, Fun-
cunstancias que le impiden ejercerlo de manera recta damento 2.1) de la función administrativa o una de las

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modalidades con las cuales se desarrolla ella y de la se predica únicamente del obrar omisivo, puesto
cual la coordinación es uno de sus principios rectores. que también puede estar presente en el cumpli-
miento de los deberes que se han radicado en cabe-
Además, se pudo observar que entre los requisitos za del delegante.
que se han establecido para la procedibilidad de la
delegación está la de ser realizada discrecionalmen- En realidad, el simple ejercicio de actividades ten-
te por un superior jerárquico hacia su subalterno, es dientes a cumplir con los deberes inherentes a la
decir, del delegante, a quien se le han impuesto los delegación no constituye de por sí el haberlos desa-
deberes de control y vigilancia que no son más que rrollado de manera eficaz, puesto que el jefe o repre-
otra manifestación de la presencia de ese principio sentante legal pudo haberlos ejecutado de manera
de coordinación, hacia el delegatario. negligente o de manera errónea, inadecuada o insu-
ficiente incidiendo significativamente en las actuacio-
Sin embargo, es necesario para comprender el es- nes del delegatario.
tado actual de la responsabilidad del delegante, en-
tender por qué al desatender el jefe o representante Ese ejercicio negligente le conlleva al delegante una
legal de la entidad el ejercicio de sus deberes cons- responsabilidad por su culpa in vigilando, si se tiene en
titucionales y legales, se configura una conducta do- cuenta que en la exequibilidad condicionada del inci-
losa o gravemente culposa que le puede significar el so segundo del artículo 21 de la Ley 1150 de 2001 se
ser responsable patrimonialmente en forma solida- habla del “recto ejercicio de sus deberes de control y
ria con el delegatario. vigilancia de la actividad precontractual y contractual”
(Corte Constitucional, C-693-08, Resuelve).
EL INCUMPLIMIENTO DE LOS DEBERES
DE INSPECCIÓN Y VIGILANCIA COMO Un ejemplo del caso descrito puede ser el haber im-
CONDUCTA DOLOSA O GRAVEMENTE partido instrucciones u orientaciones erradas al dele-
CULPOSA gatario ocasionándole un daño antijurídico a alguna
persona natural o jurídica mientras éste ejercía la
Para empezar es necesario analizar la forma en que función objeto de delegación, obligado al Estado a
se configuraría el dolo y la culpa para lo cual Cuestas indemnizar a esa persona.
y Ronderos (2005) plantean que:
Dentro de los aspectos que es necesario tener en-
El criterio para la graduación entre el dolo y cuenta al analizar las conductas desplegadas por el
la culpa grave está determinado por el grado delegante para controlar o vigilar al delegatario como
de intencionalidad en la producción de la lo manifiesta Galindo (2006):
conducta generadora del daño antijurídico, la
magnitud del descuido, el grado de impruden- Será menester considerar el ordenamiento le-
cia, la obligatoriedad de conocer las disposi- gal y el perentorio mandato del artículo 6º de
ciones aplicables y la obligatoriedad de actuar la Carta Política cuando expresa que los servi-
o de abstenerse de actuar conforme haya sido dores públicos son responsables por infringir la
dispuesto en el ordenamiento jurídico (p. 25). constitución y las leyes, y por omisión o extra-
limitación en el ejercicio de sus funciones. Por
Por ello, hay que recordar que claramente la Cons- tal motivo, esos dos aspectos, la violación de
titución y la ley han impuesto al delegante una se- la ley y la omisión o extralimitación en el ejer-
rie deberes encaminados a vigilar y controlar las ac- cicio de sus funciones, constituyen indispensa-
tuaciones que realice el delegatario como se señaló bles elementos para examinar la conducta del
anteriormente y, por ende, la ausencia de dicha vi- funcionario, para ver si se le puede calificar de
gilancia y control constituye una omisión que, al te- gravemente culposa o dolosa (p. 85).
nor de los artículos 6 y 90 Fundamentales, le hacen
responsable patrimonialmente de encontrarse que su Siguiendo al autor citado, después de no haber cum-
actuación está impregnada por el dolo o la culpa gra- plido el delegante con sus deberes o de haberlos
ve del agente. atendido de manera negligente se deben examinar
esas conductas con el objetivo de determinar si se
Pero ese grado doloso o gravemente culposo que está frente a una conducta de tipo doloso o grave-
exige el principio de la responsabilidad subjetiva no mente culposo.

Carlos Andrés Téllez Roncancio


ÁREA JURÍDICA * La responsabilidad patrimonial solidaria del
delegante en la Contratación Estatal

Para ello se debe empezar por traer a colación la Ley mediada por un error inexcusable del mismo dele-
678 de 2001, la cual presumió el dolo y la culpa gra- gatario y en la expedición irregular del acto, siempre
ve en ciertos casos y que de incurrir la conducta del que se trate de la ausencia de una formalidad sustan-
delegante en los supuestos de hecho de esas presun- cial por un error inexcusable del mismo delegatario, y
ciones se estaría efectivamente ante una conducta el delegante pudiendo no impartió las orientaciones
dolosa o gravemente culposa, según el caso, aunque generales necesarias o las impartió de manera negli-
el delegante puede demostrar lo contrario. gente, también se estaría ante la presencia de una
conducta gravemente culposa del delegante.
En este sentido, de haber ocurrido un daño que haya
llevado al Estado a sufragar una indemnización como De la misma manera, si en las anteriores situaciones
consecuencia de la declaración de nulidad de un el delegante no revisó, reformó o revocó el acto ad-
acto administrativo precontractual, expedido por el ministrativo expedido por el delegatario, no se infor-
delegatario con base en la existencia de una conduc- mó correctamente del desarrollo de la delegación o
ta constitutiva de desviación de poder del delegatario no reasumió la competencia para expedir ese acto
o en la falsa motivación del acto administrativo profe- precontractual después de haber advertido alguna
rido por éste, y el delegante pudiendo no impartió las irregularidad, se configuraría una conducta dolosa
orientaciones generales necesarias o las impartió de del delegante.
manera negligente, no revisó el acto o no lo reformó
o simplemente no lo revocó, se estaría ante la presen- Por lo anterior, si el legislador del 2001 presumió al-
cia de una conducta dolosa del delegante. gunas situaciones que están mediadas por conductas
que llevan envueltas el dolo o la culpa grave de los
Pero estas no son las únicas conductas que pueden agentes estatales, dentro de las cuales claramente
encajar en los supuestos de hecho de las presun- puede encajar la omisión del delegante de cumplir
ciones, puesto que si el jefe o representante de la con sus deberes de control y vigilancia, de ser así, le
entidad no se informó correctamente del desarrollo acarrearía por esa sola razón, responsabilidad patri-
de la delegación o no reasumió la competencia para monial y solidaria con el delegatario.
expedir ese acto precontractual, después de adver-
tir alguna irregularidad, también se configuraría una Dejando de lado las presunciones legales anteriores
conducta dolosa del delegante. y como se observó en la primera parte de este es-
crito, el artículo 5 de la Ley 678 de 2001 definió el
De igual manera, si judicialmente se halló responsa- dolo en el campo del Derecho Administrativo y más
ble penal o disciplinariamente al delegante a título de exactamente dentro del ámbito de la responsabilidad
dolo por un daño que conllevo a la responsabilidad patrimonial de los agentes estatales entendiendo por
patrimonial del Estado, se estaría ante la presencia de este el querer del servidor público para realizar un
una conducta dolosa del delegante ya probada. hecho ajeno a las finalidades del servicio del Estado o
la intención del funcionario para producir un hecho
Sin embargo, hay que aclarar que en este último totalmente ajeno a las finalidades de la función ad-
evento el dolo declarado en esos procesos judiciales ministrativa, es decir, que aquí “la intención tiene en
y administrativos no sería el dolo del sentido admi- consecuencia una relación directa con la conducta
nistrativista definido por la Ley 678 de 2001, sino el consciente del agente tendiente a producir un resul-
del sentido penal y disciplinario manejado por el Có- tado” (Cuestas y Ronderos, 2005, p. 22).
digo Penal y el Código Disciplinario Único, pero que
por mandato de la mencionada Ley son consideradas Con base en ese concepto de dolo, el delegante pue-
conductas dolosas del delegante que le conllevan una de llegar a tener la intención de dejar de cumplir con
responsabilidad patrimonial. sus deberes de controlar y vigilar la actividad delega-
da por determinado motivo para buscar un objetivo
Por las anteriores razones de haber ocurrido un daño diferente a los fines que la Constitución y la ley han
que haya llevado al Estado a cancelar una indemni- fijado para el Estado Social de Derecho los cuales ha-
zación como consecuencia de la declaración de nuli- brán de ser objeto de prueba en el momento en que
dad de un acto administrativo precontractual expedi- se pretendan enjuiciar.
do por el delegatario con base en la infracción de las
normas superiores en las que debía fundarse el acto Sin lugar a dudas, el gran problema de configurar la
administrativo o en la incompetencia del delegatario omisión o el cumplimiento erróneo de los deberes del

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delegante como una conducta dolosa es el probar la de una infracción directa a la Constitución o a la ley
intención que medió ese actuar, dado que el móvil voli- o de una inexcusable omisión o extralimitación en el
tivo del agente rara vez es exteriorizado de una manera ejercicio de la funciones.
concreta o por lo menos percibible por el afectado o
el Juez Contencioso Administrativo a la hora de juzgar. Como dije anteriormente, una interpretación siste-
mática de los artículos 1, 2, 6, 123, 124, 209 y 211
Sin embargo, a pesar de los problemas probatorios de la Carta Magna y el querer del Constituyente res-
que implica el actuar doloso del delegante a la hora pecto de este último canon constitucional dejan en
ejercer sus deberes el solo hecho de querer dejar de claro que la delegación no excluye al delegante de
cumplir con los mismos o la intención de desplegán- responsabilidad puesto que aún se predica su respon-
dolos de manera equivocada, inadecuada o insufi- sabilidad del correcto ejercicio de sus deberes.
ciente para buscar objetivos diferentes a los estableci-
dos por el Constituyente y el Legislador, es un motivo Esos deberes precisamente son los de asegurar el
suficiente para tomar tal actitud como una conducta cumplimiento de los deberes sociales, cumplir con la
dolosa por parte del delegante como para que res- Constitución y las leyes, servir al Estado y a la comuni-
ponda patrimonialmente por los daños causados por dad, coordinar sus actuaciones, impartir orientaciones
su conducta de ser ésta la fuente del daño antijurídi- generales, revisar los actos del delegatario, reformar
co por el cual resultó condenado el Estado. los actos del delegatario, revocar los actos del delega-
tario, informarse sobre el desarrollo de la delegación,
Lo anterior tiene apoyo en las mismas razonas que reasumir la competencia delegada y dirigir y manejar
encontró la Corte Constitucional para decidir la exe- la actividad contractual y los procesos de selección.
quibilidad condicionada del inciso segundo del artí-
culo 21 de la Ley 1150 de 2007, es decir, en que el Por lo tanto, si el jefe o el representante de la entidad
artículo 211 de la Constitución no excluye completa- estatal decide no ejercer adecuadamente los mencio-
mente de responsabilidad al delegante, puesto que nados deberes, claramente está infringiendo la Cons-
a pesar de que el jefe o representante de la entidad titución y la ley, puesto que están contenidos en ellas
haya transferido su competencia de desarrollar pro- y al ser concretados a través del despliegue activo de
cesos contractuales no ha trasladado los deberes que conductas del delegante, conllevan una omisión del
la misma Carta Política le ha impuesto como servidor ejercicio de las mismas, es decir, que evidentemente
público y como delegante. se estaría actuando de manera gravemente culposa y
más aún si lo que se hace es cumplir con los deberes
Por ello el principio de coordinación administrativa de manera negligente de donde se derivaría su res-
que no desaparece por el hecho de haber traslada- ponsabilidad por la culpa in vigilando.
do competencias a través de la delegación le impone
como servidor público, delegante y superior jerárqui- CONCLUSIONES
co el deber de coordinar las labores que sus subor-
dinados deben ejecutar “para el adecuando cumpli- Al comenzar con este escrito me propuse esclarecer el
miento de los fines del Estado” (C.P, Art. 209). por qué es tomado el incumplimiento del delegante
de su deber de controlar y vigilar los actos del delega-
Por tal motivo, el querer prescindir del recto cumpli- tario como una conducta gravemente culposa o dolosa
miento de esos deberes concretados en el control, ins- que le conlleva al delegante ser patrimonialmente res-
pección y vigilancia de los delegado para realizar un he- ponsable de manera solidaria con el delegatario.
cho ajeno a los fines estatales hacen que esa conducta
sea catalogada como dolosa y haga al jefe o represen- Para ello partí de la forma como la Constitución
tante legal de la entidad responsable patrimonialmente Política y los desarrollos legales de la misma carac-
frente al Estado, pero en este caso no de manera solida- terizaron a la figura de la delegación de compe-
ria frente al delegatario pues éste estaría siendo utilizado tencias e impusieron una regla general en materia
como un mero instrumento por el delegante. de responsabilidad derivada de esta figura la cual
quedaba radicada de manera exclusiva en el de-
En relación a la configuración de la culpa grave, como legatario, pero a través de un estudio del marco
se señaló en la primera parte de este documento, el constitucional y legal de esa modalidad de la fun-
artículo 6 de la Ley 678 de 2001 la definió como ción administrativa se evidenciaron cinco excep-
aquella en la que el daño producido es consecuencia ciones a esa regla general.

Carlos Andrés Téllez Roncancio


ÁREA JURÍDICA * La responsabilidad patrimonial solidaria del
delegante en la Contratación Estatal

La última de esas excepciones está conformada por la delegación y que radicaban en cabeza del jefe o
la responsabilidad derivada por la denominada culpa representante legal de la entidad estatal.
invigilando o la omisión en el cumplimiento de los
deberes de control y vigilancia por parte del delegan- Así en este artículo se ha demostrado que la omi-
te sobre los actos del delegatario. sión o el cumplimiento defectuoso de esos deberes
son tomados como conductas dolosas o gravemente
La disposición legal que contiene esta excepción fue culposas porque la Ley 678 de 2001 consagró unas
declarada exequible condicionalmente a través de la presunciones que hacen que ese actuar del delegante
Sentencia C-693 de 2008 bajo el entendido de que encaje en los supuestos de hecho de algunas de esas
el delegante respondería del recto ejercicio de esos presunciones y porque la sola intención del delegan-
deberes si ello constituía una conducta dolosa o gra- te de dejar de atenderlos para buscar un objetivo di-
vemente culposa. ferente al cumplimiento de los fines del Estado confi-
guran una conducta dolosa, además de que el incum-
De ese fallo de la Corte Constitucional surgió el inte- plimiento de esos deberes es de por sí una infracción
rrogante planteado y que dio origen a este artículo, el directa a la Constitución y a la ley y una inexcusable
cual se resolvió mostrando que los deberes a los que omisión al ejercicio de sus funciones como jefe o re-
se refería la norma no desaparecían por el hecho de presentante legal de una entidad estatal.

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