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*420190118572016000470501137040*
420190118572016000470501137040034
NOTIFICACION N° 11857-2019-SP-PE
EXPEDIENTE 00047-2016-40-0501-JR-PE-03 SALA 1° SALA PENAL DE APELACIONES - NCPP
RELATOR SARITA CINTHYA AGUINAGA ROSADO SECRETARIO DE SALA
23 DE SETIEMBRE DE 2019
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EXPEDIENTE : 00047-2016-40-0501-JR-PE-01
ESPECIALISTA : SARITA CINTHYA AGUINAGA ROSADO
IMPUTADO : RODOLFO RODRÍGUEZ RAYMUNDEZ Y OTROS
DELITO : USURPACIÓN AGRAVADA
AGRAVIADO : GLORIA ANA DELGADILLO GAMBOA
SENTENCIA DE VISTA
Resolución Nº 21
Ayacucho, dieciocho de setiembre
del año dos mil diecinueve.
I.-
I.- VISTOS y OÍDOS:
OÍDOS:
3.-
3.- EXPRESIÓN DE AGRAVIOS
3.1.-
.1.- Conforme a lo actuado durante la audiencia de apelación, la defensa técnica del
sentenciado, solicita que se declare nula la sentencia recurrida por los siguientes
fundamentos:
B. De la
la defensa técnica de los sentenciados Alberto Felices Bellido e Isaac Quispe
Alcahuamán
4.1. Delimitando la competencia de esta Sala Penal Superior, es preciso señalar que de
conformidad con el artículo 409º y 419.1 del Código Procesal Penal, la impugnación
confiere al Tribunal competencia solamente para resolver la materia impugnada, así
3
5.-
5.- DELIMITACIÓN DEL PRONUNCIAMIENTO
El problema jurídico objeto de la presente resolución estriba en determinar si la
resolución apelada incurre en:
1
STC 01555-2012-PHC/TC. FJ N° 4.- Este Tribunal, tiene la posibilidad de revisar lo emitido por el Juez de
Investigación Preparatoria, sin más límites que los establecidos por el recurrente en su escrito de impugnación. Es decir
el tribunal Superior, no puede extralimitarse, más allá de lo solicitado por el recurrente apelante.
4
6.-
6.- CONSIDERACIONES PREVIAS
7.-
7.- POSICIÓN DE LOS SUJETOS PROCESALES
7.1.
.1. La defensa técnica del sentenciado Rodolfo Rodríguez Raymúndez, denuncia vicio
de motivación sustancialmente incongruente, señalando que el A quo no habría
tomado en consideración la tesis planteada en juicio oral, por la defensa del
recurrente, quien habría invocado error de tipo respecto a la conducta del
sentenciado, al referir que éste antes de ingresar a tomar posesión del bien inmueble,
había adquirido la propiedad mediante Escritura Pública de Compraventa de sus
anteriores propietarios, Vicente Rodríguez Raymundez y sus hermanas, hecho del cual
el juez habría omitido pronunciarse en la sentencia, vulnerando lo establecido en el
artículo 394° del Código Procesal Penal referido a los requisitos que debe cumplir la
sentencia, como son: la enunciación de las pretensiones de la defensa del acusado y la
motivación clara, lógica y concreta de cada uno de los hechos y circunstancias que se
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FERNANDEZ, R.; GUIRARDI, O.; ANDRUET, A. y GHIRARDI, J. (1993) La Naturaleza del Racionamiento
Judicial: El razonamiento débil. Alveroni Ediciones. Córdoba, p. 117.
3
Ibid, p. 11
6
Asimismo, denuncia motivación insuficiente, señalando que el A quo habría hecho uso
de la prueba indiciaria, sin establecer cuál es la inferencia lógica que le permitió llegar
a la conclusión que el día 07 de octubre los sentenciados habían mantenido
comunicación telefónica a fin de concertar el hecho delictivo, además de no haber
señalado si el indicio empleado se trata de un indicio contingente, plural o
convergente, que son exigencias legales para imponer una sentencia condenatoria.
Asimismo, el A quo habría omitido valorar los contra indicios presentados, los cuales
son:
iii) Escritura Pública de Compraventa, de fecha 21 de julio de 2015, que daría cuenta
que su patrocinado adquirió la propiedad materia de litis de su anterior propietario,
Vicente Rodríguez Raymundez y sus hermanas.
7.2. Por su parte, la defensa técnica de los sentenciados Alberto Felices Bellido e Isaac
Quispe Alcahuamán señala que:
Por otro lado, respecto a Isaac Quispe Alcahuamán, sostiene que si bien, éste impidió
a la agraviada ingresar a su vivienda, fue porque la misma ya se encontraba arrendada
para funcionar como almacén de la Empresa FEBEATEL, además de que él había sido
contratado como guardián para cuidar el local. Así, el hecho de haber incriminado en
el delito a Isaac Quispe Alcahuamán, por el simple hecho de no haber dejado ingresar
a la agraviada, constituiría una vulneración al principio de presunción de inocencia,
más aún cuando la conducta de sus dos patrocinados sería atípica, al ser consecuencia
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de una relación contractual. Razones por las que solicita se declare nula la resolución
recurrida.
Asimismo, respecto a que no se habrían valorado los contra indicios presentados por la
defensa del sentenciado Rodolfo Rodríguez Raymundez, refiere que la sentencia
recurrida no se fundamentó en base a prueba indiciaria, sino más bien con prueba
directa, las cuales fueron ofrecidas en su oportunidad y que el A quo habría valorado
de manera conjunta. Por otro lado, en cuanto a la motivación inexistente, en el
sentido de que no se habría motivado el quántum de la pena, sostiene que el A quo en
el fundamento N° 17 de la resolución recurrida sí da cuenta sobre la determinación
de la pena, es así que para imponer la pena de 12 años a Rodolfo Rodríguez
Raymundez, habría aplicado el sistema de tercios, hecho del cual el A quo sí habría
dado cuenta en la sentencia.
Alberto Felices Bellido, para impedirle el ingreso a la madre de la agraviada, para que
luego el sentenciado Rodolfo Rodríguez Raymundez tomar posesión del inmueble,
amparándose en un Testimonio de compraventa otorgado a su favor con fecha 28 de
agosto de 2015.
8.1. Los fundamentos que sirvieron al juez de primera instancia para condenar a los
imputados, fueron los siguientes:
Sobre la posesión previa del predio sub litis, por parte de la agraviada Gloria
Gloria Ana
Delgadillo Gamboa,
Gamboa, se acredita con lo siguiente:
oeste, con la propiedad de doña Lucila Delgadillo Junco; por el lado izquierdo o sur,
con el Jr. Huancayo.
iv) De la copia legalizada de los recibos de pago por los servicios de agua y luz
eléctrica, que corren a folios 63 del expediente judicial, acredita que en los años
1990,1993 y 1994, el inmueble ubicado en el jr. España N° 124-126 del distrito
de San Juan Bautista – Huamanga, contaba con los servicios de agua y luz eléctrica,
registrados a la persona quien en vida fue Victorio Delgadillo Junco, padre de la hoy
agraviada Gloria Ana Delgadillo Gamboa.
vi) De la memoria descriptiva del inmueble ubicado en el Jr. España N° 124 – 126
del distrito de San Juan Bautista, de fecha enero de 2009, que en copia legalizada
corre a folios 73 del expediente judicial, corrobora los límites, linderos y el área total
del inmueble ubicado en el Jr. España N° 124 – 126, del distrito de San Juan
Bautista, lo que hace concluir, que el predio cuenta con un área total de 318.00 m2
y un perímetro de 86.90 ML.
De la valoración
valoración en conjunto de las pruebas
c) Desde el año 2005, hasta el 07 de octubre del año 2015, la persona de Gloria
Ana Delgadillo Gamboa, ha venido posesionando de manera pública, pacífica y
continua, el predio sub litis; tal es así, que los servicios de agua y luz eléctrica, con
los que contaba el predio en mención, primigeniamente estaban registrados a
nombre de su señor padre Victorio Delgadillo Junco, y posteriormente fueron
cambiados a nombre de la referida agraviada.
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Nótese que el contrato ha sido en parte del inmueble y la otra parte era para que la
propietaria pudiera ingresar para el regado de sus plantas que se encontraban en su interior.
15
g) Finalmente, con fecha 21 de noviembre del año 2015, la agraviada Gloria Ana
Delgadillo Gamboa, con el apoyo de sus familiares logró ingresar al inmueble sub
litis, con la finalidad de recuperar la posesión del mismo, conforme se tiene del
acta de constatación fiscal de esa fecha; sin embargo, no ha sido posible; tal es así,
que hasta la fecha el predio sub litis viene siendo ocupado por el acusado Rodolfo
Rodríguez Raymundez.
9.1.
.1. El delito de Usurpación en su tipo base está prescrito en el artículo 202° del
Código Penal con el siguiente texto: “Será reprimido con pena privativa de libertad no
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menor de dos ni mayor de cinco años: (…) 2.- El que, con violencia, amenaza, engaño
o abuso de confianza, despoja a otro, total o parcialmente, de la posesión o tenencia
de un inmueble o del ejercicio de un derecho real. El artículo 204° inciso 2) prevé la
figura jurídica agravada cuando señala (con la intervención de dos o más personas)”.
9.2.
9.2. Esta modalidad delictiva del delito de usurpación, previsto en el inciso 2) del
artículo 202° del Código Penal, se denomina mediante el despojo, es decir, desplazar
a su propietario o poseedor inmediato de su inmueble, quedándose el usurpador con
dicho bien para el uso y disfrute de la misma, utilizando para ello alternativamente,
que pueden ser, actos violentos, para ello utiliza la fuerza bruta al sacar al poseedor
de su interior, o mediante la amenaza, que es el anuncio que le hace el usurpador de
un mal inminente en contra de su integridad física o de terceros cercanos al agraviado;
también, se puede producir mediante situaciones fraudulentas, como es el engaño o el
abuso de confianza; al respecto, el Profesor Ramiro Salinas Siccha5,” define el engaño
como la desfiguración de lo verdadero o real capaz de inducir a error a una o varias
personas. El engaño viene a ser el despliegue de actos verbales o ejecutivos o de falso
cariz, destinados a conseguir la entrega del inmueble, privando de esta manera de la
posesión o tenencia al sujeto pasivo. El engaño puede ser o no ser un ardid, bastando
que sea una simple mentira de la cual se vale el agente para inducir a error a la víctima
y despojarlo de todo o parte de su inmueble”.
9.3.
9.3. En el caso de autos, de acuerdo a la acusación fiscal y que ha sido mencionado
en la sentencia apelada respecto al delito de usurpación, señala que “Gloria Ana
Delgadillo Gamboa, es posesionaria del predio ubicado en el Jr. España N° 124-126, del
distrito de San Juan Bautista, provincia de Huamanga, departamento de Ayacucho, desde
hace cincuenta años aproximadamente, inmueble que se encuentra inscrito en los
Registros públicos con la partida N° PII011546, anterior a ella, estaba posesionado por su
extinto padre Victorio Delgadillo Junco, de quien heredó el inmueble el año 2015, en virtud
del testimonio de la escritura pública con el título N° 2014-00003343, partida N° 11018795,
asiento COOOI, finalmente su señor padre está empadronado en COFOPRI desde 1999.
9.4.
9.4 Ante un problema en el Internet en el inmueble de doña Norma Delgadillo Gamboa
(hermana de la agraviada Gloria Ana Delgadillo Gamboa) ubicado en el Jr. Ica N° 106 del
5
Ramiro Salinas Siccha, Derecho Penal Parte Especial, Sexta edición, Volumen II, editorial
Justitia, año 2015. página 1291
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distrito de San Juan Bautista, ubicado a media cuadra del predio materia de litis Jr. España
N° 124-126; es así que al inmueble se presentó el acusado Alberto Felices Bellido,
aduciendo ser técnico enviado por la empresa Movistar para reparar dicha avería y
manifestó además ser empresario, gerente de la empresa FEBEATEL SAC. Esta persona
logra convencer a doña Norma Delgadillo Gamboa, para que le comunique a su hermana
Gloria Ana Delgadillo Gamboa para que le alquile el inmueble ubicado en el Jr. España N°
124-126, quien con fecha 07 de octubre de 2015 suscribieron el contrato de alquiler entre
Eduarda Gamboa Ochoa en representación de su hija Gloria Ana Delgadillo Gamboa y
Alberto Felices Bellido, entregándole la posesión del inmueble, una de las condiciones
establecidas en el contrato era que el arrendatario le permitiera ingresar al inmueble de
manera constante, a fin de regar y cuidar las plantas existentes al interior del inmueble sub
litis.
9.5. Una vez obtenido las llaves de ingreso al inmueble Alberto Felices Bellido, y había
dejado como guardián a Isaac Quispe Alcahuamán, quien al poco tiempo impide el ingreso
al interior a doña Eduarda Gamboa Ochoa( madre de la agraviada Gloria Ana Delgadillo
Gamboa), quien se dio con la sorpresa de que las llaves de la puerta de ingreso al predio,
habían sido cambiadas, y ante su reclamo, el acusado Isaac Quispe Alcahuamán, le
manifestó que era una orden de parte del señor Alberto Felices Bellido de no dejar ingresar
a nadie al predio.
Después de unos días el predio sub litis apareció ocupado por el acusado Rodolfo
Rodríguez Raymundez, quien tampoco les permitió el ingreso aduciendo ser propietario del
predio del Jr. España N° 124-126 de San Juan Bautista. Es así, que, a partir del 09 de
octubre del año 2015, el acusado Rodolfo Rodríguez Reymundez tomó la posesión de la
totalidad del predio sub litis, donde Alberto Felices Bellido como presunto inquilino e Isaac
Quispe Alcahuamán como presunto cuidador del predio facilitaron el despojo de la
posesión de la agraviada Gloria Ana Delgadillo Gamboa, y el ingreso al predio materia de
litis, de Rodolfo Rodríguez Raymundez”(sic).
9.6.
9.6. Con los hechos expuestos, se tiene que, no se trata de un contrato de alquiler de
buena fe por parte de Alberto Felices Bellido, sino parte de la modalidad empleada en
esta clase de delito de usurpación; es decir, la determinación delictiva es antes de la
celebración del contrato, el cual sirve de instrumento para después señalar que se trata
de un asunto civil y no penal; así se da el caso que una persona que se presenta
18
9.7.
9.7. El señor Juez de la causa, en la sentencia recurrida ha señalado que los imputados
Alberto Felices Bellido, Isaac Quispe Alcahuamán y Rodolfo Rodríguez Raymundez,
han concertado para despojar del inmueble de la agraviada, haciendo uso del engaño,
Alberto Felices para convencer que la agraviada alquile el inmueble en la suma de un
mil soles mensuales, una vez que se retira la agraviada de su interior, cambian de
persona que no es el arrendatario por Isaac Quispe Alcahuamán, y finalmente
terminan con la persona de Rodolfo Rodríguez Raymundez, con ello, la agraviada no
sabe a quien reclamar el inmueble de su propiedad, y si ello es así, en efecto, la
situación jurídica de los imputados no le corresponde como cómplices respecto a
Alberto Felices Bellido e Isaac Quispe Alcahuamán, sino de coautores, conjuntamente
con Rodolfo Rodríguez Raymundez.
9.8.
9.8. Así también, como señala la sentencia recurrida, ha sido probado en juicio oral
que entre los tres acusados existía una relación de amistad desde el año 2014, y que
estos mantenían una comunicación constante, conforme se tiene del registro de
llamadas telefónicas de acuerdo al informe sobre el levantamiento del secreto de las
comunicaciones, para lograr el despojo del inmueble de propiedad de la agraviada
Gloria Ana Delgadillo Gamboa; entonces, entre los tres imputados ha existido una
distribución de roles, primero el imputado Alberto Felices Bellido, convencer a doña
Eduarda Gamboa Ochoa, madre de la propietaria Ana Delgadillo Gamboa, para que le
alquile el inmueble y suscribir el contrato como instrumento del accionar delictivo; y,
19
el cual forma parte del plan predeterminado por los tres imputados; y, sucedió antes
del contrato y de la ocupación del inmueble, una vez ello, con el contrato en la
mano, ingresa al inmueble en su segunda fase Isaac Quispe Alcahuamán como
supuesto “guardián” contratado por Alberto Felices, y era para cambiar la chapa de la
puerta e impedir el ingreso a doña Eduarda Gamboa Ochoa; finalmente, en su tercera
fase ingresa y toma posesión del inmueble Rodolfo Rodríguez Raymundez,
amparándose en un testimonio de compra venta otorgado a su favor con fecha agosto
de 2015; no obstante que este inmueble le pertenece en propiedad y por tanto en
posesión a doña Gloria Ana Delgadillo Gamboa.
9.9.
9.9. Los imputados para incurrir en el delito de usurpación, han despojado a su
poseedora doña Gloria Ana Delgadillo Gamboa, mediante el engaño, pues, Alberto
Felices Bellido ha logrado convencer a una persona mayor de edad doña Eduarda
Gamboa Ochoa,- posteriormente fallecida con fecha 19 de julio de 2019 obra en folios
511- para que le alquile el inmueble porque lo necesitaba para efectuar sus actividades
empresariales, luego esta persona le encarga el inmueble a otra persona Isaac Quispe
Alcahuamán, como “guardián” cuando estaba prohibido para ello, y con la finalidad
de cambiar la chapa de la puerta de ingreso y no permitir el ingreso de su propietaria,
pese a la condición del contrato, y finalmente, esta persona cede el inmueble a un
tercero Rodolfo Rodríguez Raymundez, quien señala ser el propietario del inmueble
por tratarse de una herencia. Es decir una cadena de actos, que entre los imputados
han acordado para despojar y apropiarse del inmueble de otra persona, fungiendo
documentos que no se ajustan a la realidad, para el caso de autos, está debidamente
acreditado la titularidad del inmueble por parte de la agraviada Gloria Ana Delgadillo
Gamboa.
9.10
.10. En cuanto al argumento durante su alegato de clausura por parte de la defensa
técnica del sentenciado Rodolfo Rodríguez Raymúndez, quien denuncia vicio de
motivación sustancialmente incongruente, señalando que el A quo no habría tomado
en consideración la tesis planteada en juicio oral, quien habría invocado error de tipo
respecto a la conducta del sentenciado, al referir que éste antes de ingresar a tomar
posesión del bien inmueble, había adquirido la propiedad mediante Escritura Pública
de Compraventa de sus anteriores propietarios, Vicente Rodríguez Raymundez y sus
hermanas, hecho del cual el juez habría omitido pronunciarse en la sentencia,
20
9.11.
9.11. Asimismo, denuncia motivación insuficiente, señalando que el A quo habría
hecho uso de la prueba indiciaria, sin establecer cuál es la inferencia lógica que le
permitió llegar a la conclusión que el día 07 de octubre los sentenciados habían
mantenido comunicación telefónica a fin de concertar el hecho delictivo, además de
no haber señalado si el indicio empleado se trata de un indicio contingente, plural o
convergente, que son exigencias legales para imponer una sentencia condenatoria.
Asimismo, el A quo habría omitido valorar los contra indicios presentados, los cuales
son: i) La declaración de la señora Eduarda Gamboa (madre de la agraviada), de
Gloria Delgadillo Gamboa (agraviada) y Norma Consuelo Delgadillo,
Delgadillo quienes de
manera uniforme habrían referido que el 01 de setiembre de 2015, luego de la avería
de su teléfono fijo, la señora Eduarda Gamboa se había constituido a la Empresa
Telefónica del Perú, para solicitar la reparación de su teléfono, es así que la Empresa
envía al técnico y hoy sentenciado Alberto Felices Bellido para la reparación del
teléfono, contra indicio que no habría sido valorado adecuadamente por el A quo, al
señalar que los sentenciados habrían concertado para que Alberto Felices Bellido, con
la excusa de reparar el teléfono vaya a la vivienda de la agraviada para luego
apoderarse de las llaves del inmueble o peor aún, que los sentenciados hayan tenido la
capacidad de manipular el sistema de la Empresa Telefónica del Perú. Es así que el A
quo, no habría justificado por qué las llamadas telefónicas acreditarían que hubo un
acuerdo previo entre los sentenciados, la razón por la que presume que el contenido
de la conversación se trató de un reparto de roles o de una concertación delictiva,
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• Este Colegiado en atención a los puntos señalados por la defensa del imputado
Rodolfo Rodríguez Raymundez, expresa que de una atenta lectura de la
sentencia recurrida, el Juez de la causa no efectúa la aplicación de la prueba
indiciaria, valora la prueba en forma directa, respecto a la conducta de cada
uno de los imputados, las declaraciones de la parte agraviada y testigos, las
documentales que han sido oralizados en juicio oral ofrecidas tanto por el
Ministerio Público como por la defensa de manera individual y en forma
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conjunta, las que guardan relación con los hechos, cuando utiliza la expresión
“se infiere” denotando alguna regla de la inferencia lógica, lo que se interpreta
en puridad es si se colige, se deduce, se concluye, etc. En consecuencia, los
puntos señalados por la defensa antes mencionados, no pueden ser
considerados como contra indicios, porque también han sido valorados por el
juez todos estos aspectos mencionados; empero, para este Colegiado estas no
tienen la consistencia, para enervar las pruebas de cargo de imputación, y
desacreditar las documentales expedidas por las autoridades competentes en
materia registral, que señala de manera indubitable y fuera de toda duda, que
el inmueble es de propiedad de doña Gloria Ana Delgadillo, a quien han
despojado. Para conocer el número de llamadas entre los imputados, como por
ejemplo, el día que se produjo el alquiler del inmueble de la agraviada, con
fecha 7 de octubre de 2015, entre los imputados se han efectuado llamadas
de manera recíproca, no se puede determinar de qué conversaron; empero,
por las máximas de la experiencia, de lo sucedido posteriormente con el
inmueble, se colige que ha sido sobre dicho inmueble, entre otras llamadas
registradas que ha señalado el Juez de la causa, de acuerdo al levantamiento
del secreto de las comunicaciones.
9.12. Por su parte, la defensa técnica de los sentenciados Alberto Felices Bellido e
Isaac Quispe Alcahuamán señala que: Entre su patrocinado Alberto Felices Bellido y la
agraviada, existe un Contrato Notarial de Alquiler de bien Inmueble, en razón a ello,
la agraviada antes de acudir a la vía penal, debió hacer valer su derecho en la vía civil,
hecho que no habría ocurrido en el presente caso. Por otro lado, denuncia vulneración
del principio de exhaustividad, debido a que el A quo pese a que el representante del
Ministerio Público solo cuenta con una prueba que supuestamente incriminaría a sus
patrocinados, el cual es el levantamiento del secreto de las comunicaciones, habría
amparado sus fundamentos, sin explicar las razones por las que presume que el
contenido de la conversación telefónica se trató de un reparto de roles o de una
concertación delictiva.
9.13.
9.13. Al respecto, el Juez de la causa, señala que entre los imputados ha existido una
resolución criminal, la que se encuentra acreditada con la abundante prueba producida
válidamente en el juicio oral, y la decisión común ha sido despojar de su inmueble a la
agraviada, asignándose cada uno de ellos roles y participar en la fase de ejecución,
cada uno con un aporte esencial. Este Colegiado, comparte plenamente con los
argumentos expuestos por el Juez de la causa, porque en efecto, de acuerdo a la
sucesión de los hechos, ha existido un plan determinado y asignación de roles, por ello
se ha calificado la conducta de cada uno como co autores, de acuerdo al siguiente iter
delictivo, se inicia con el contrato civil de arrendamiento, luego el inmueble pasa a
otra persona, que le cambia las chapas de la puerta de ingreso para impedir su acceso
a la agraviada, y finalmente una tercera persona, que se considera propietario del
24
9.14.
9.14. A mayor abundamiento en cuanto a Isaac Quispe Alcahuamán, sostiene que si
bien, este impidió a la agraviada ingresar a su vivienda, fue porque la misma ya se
encontraba arrendada para funcionar como almacén de la Empresa FEBEATEL,
además de que él había sido contratado como guardián para cuidar el local. De lo
expresado por la defensa del indicado imputado, se colige que efectivamente no había
dejado ingresar a su propietaria pese a la condición establecida en el contrato que
ingrese para regar sus plantas, lo que sucede es que estaba dando cumplimiento el plan
y rol encomendado en co autoría, en su propósito de despojo del inmueble.
III.-
III.- DECISIÓN
9.16
9.16 Consideraciones por las cuales, los jueces integrantes de la Primera Sala Penal de
Apelaciones de Huamanga, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 409.1 y
419.1 del Código Procesal Penal, RESOLVEMOS DECLARAR
DECLARAR POR UNANIMIDAD:
UNANIMIDAD
25
1.-
1.- INFUNDADO
INFUNDADO el recurso de apelación interpuesto por los abogados defensores de
los sentenciados Rodolfo Rodríguez Raymundez, Alberto Felices Bellido e Isaac Quispe
Alcahuamán.
En consecuencia:
2.-
2.- CONFIRMAR la resolución recurrida, contenida en la resolución 15 de fecha 09
de mayo de 2019, mediante la cual el Segundo Juzgado Penal Unipersonal de
Huamanga, resolvió condenar a Rodolfo Rodríguez Raymundez, Alberto Felices Bellido
e Isaac Quispe Alcahuamán, como coautores del delito contra el Patrimonio, en la
modalidad de Usurpación Agravada, en agravio de Gloria Ana Delgadillo Gamboa,
imponiéndole al primero 12 años de pena privativa de libertad y a los dos últimos 05
años de pena privativa de libertad, así como el pago solidario de S/. 20,000.00 soles
por parte de los sentenciados a favor de la agraviada, con todo lo demás que contiene
la precitada sentencia.
3.-
3.- NOTIFÍQUE
NOTIFÍQUESE
QUESE a Los sujetos procesales en acto público; y DEVUÉLVASE los
actuados al juzgado de origen en su oportunidad.
S.S.
DONAIRES CUBA..-
ORTIZ
ORTIZ ARÉVALO (DD).
(DD).-
OLARTE ARTEAGA.-
26