A Ñ O XVII. MADRID- N t T M . S.

'

CRÓNICA HISPANO-AMERICANA.
FUNDADOR Y P R O P I E T A R I O . — D . E D U A R D O ASQUERINO. Luises 2 8 d e Abril d e 1 8 7 3 . DIRECTOR.—D. E U S E B I O ASQUERINO.

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riano), Colmeiro, Correa, Cueto, Sra. Coronado, SréS; Calvo Asensio, Dacarrete, Echegaray, Eguilaz, Escosura, Estrella, Fernandez Cuesta, Ferrer del Rio, Kiguerola, Kigueroa (Augusto Suarez de), Forte-
za. García (Gutierre;., Gayangos, Graells, Harzenbusch, Janer, Feliu, Labra, Larra, Larrañaga, Lasala, Lorenzaaa, Llórente, Mata. Mané y Flaquer, Montesino, Molins (Marqués de), Martos, Moya(F. J.), Ochoa'
Olavarría, Olózaga, Osorío, Palacio, Pasaron y Lastra, Pi Margall, Poey, Reinoso, Retes, Rios y Rosas, Rivera, Rivero, Romero ürliz, Roiriguez y Maño/,, Rosa y González, Ros.de Olano, Rossell, Ruiz Aguilera,
Rodríguez (G.), Rodríguez (D. J.), Selgas, Sanz, Segovia, Salvador de Salvador, Salmerón', Sanromá, Serrano Alcázar, Selles, Saamartih, Trueba, Tubino, Varea, Valera, Boix, Vidart, Wilson (baronesa de).

SUMARIO.
Hevista general, por D. F . — Organización
política y económica de la Confederación Ar-
gentina, por D. CrislÍQO MiHos.—Sinónimos
castellanos, por D. Manuel Bretón de los
Herreros.—Sueltos.—Literatura americana.
Pláetdo, por D. Vicente Barrantes.—Des-
cripción sumaria de la República de Méjico,
—Lo desvergiirnza. Poema joco-sériopor don
Manuel Bretón de los Herreros, por D. Joté
Amador d,^ \o^ Ihas.—Es ludios histórko-po-
U'icos sobre d gobie rvo antiguo de Aragón,
por D. Mínuel Lasa!a.—Biogrofia. Deran-
ger, por D. Antonio Ferrar del Rio.—La In-
dia inglesa, por D. Augusto VWoa.—Recla-
mos.—Anuncios.
REVISTA GENERAL.
I.
No sabemos si e l dia 23 de Abril del
presente año ¡será seDalado con júedra
blanca ó con piedla negra en los íaslos
de la Repiiblica y en la historia de la
patria; lo que t-í eí> posible asegurar ya
noy, es que eáe dia formará época eii
nuestra vida política y en los anales de
la revcluciüu de 1868; es que, á partir
de ese dia, se inaugura entre nosotros
un período completamente nuevo, y las
parcialidades y lus hombres entran por
eendas nuevas también y hasta ahora
desconocidas, que los llevarán á ñues
auD imprevistos y velados por el miste-
rio qut^ füvuelveel-.porveLiir.
Eü tale ];uiito; y antes de narrar
lo sucedido úuranttí la última quincena,
permítaseiios dirigir uua breve, breví-
sima oje&daálo pasado, sin la cual es
difícil expiicar.-tí bien lo presento y más
aun prüüu,-t¡car dcutiO de los límites de
lo posible lo que aquí habrá de suceder
en un período Uiás ó méaoo largo. Esta
ojeada será como ¿1 exámeu de concien-
cia del pec:idor, que si le pmrifica por el
momento, las mii^ de las veces solo le
dispone á incurrir de nuevo y como con
mayor tranquilidad y desahogo en la
cu pa de que lan concienzuda y fervoro-
BameuU; ti- arriidnlitra.
Desde el ¡riincr tercio de este .siglo ve-
Dimos ¡üchan<lü por establecer las doc-
trinas liberalís y arraigar un gobierno
popular en España, y aun no lo hemos
conseguido. 8olo en breves periolos nos
f"é hcito iniciar esa obra penosa y dila-
tada. Se.->c-!ita años pasaron m esta ta-
í e a l k n a de arigustiosos conflictos , dis-
tante de tolla paz, agena á toda tran-
quilidad. ¡Sesenta años! Al cumplirse,
Cayó por primera vez el trono, y hay
que convenir en que cayó como esos edi-
ficios carcomidos por el embate de los leyes los principios de la escuela demo- II.
áíglüs y la inclemencia de los tiempos; crática, la semilla de las futuras refor-
al primer eco de la tempestad. mas. • El partido radical olvidó, entre otras
Él trono era el mayor y el »más sólido Se creó á su lado una monarquía po- cosas, las siguientes:
de los obstáculos opuestos á la aspira- pular y en su origen, electiva. A la som- Que él ha hecho posible la proclama-
ción que latía en la conciencia del pue- bra de esta monarquía prosiguió el tra- ción de la República;
blo. Los que lo derribaron, antes de le- bajo revolucionario, y crecieron las difi- Que sus fuerzas sin las del partido re-
vantar nada sobre el campo de la patria, cultades, y se desarrollaron los obstácu- publicano eran escasas para sostener la
desierto-, dedicáronse á realizar esa as- los y se hizo más vigorosa y más sorda libertad;
piración. la lucha interna que desde Alcolea habíase Que la libertad está siempre al lado da
Esa aspiración era, ya lo hemos dicho, trabado en el seno de laTevolucion, entre los que sinceramente la aman, no de loa
estableceruo gobierno inspirado en las el espíritu democrático y el espíritu con- que la m'stifican hoy para desconocerla
doctrinas liberales, cimentado eu los de- servador y estacionario. Cada palmo de mañana y la invocan ahora para aho-
seos y en el programa de la democracia, terreno costaba una batalla y como las garla cuando á sus fines convenga.
que es ley de vida de nuestra edad, con^ batallas lasganabaladeruocracia, las per- El partido republicano, en cambio, ha
(lición inexcusable de nuestro tiempo, día el trono, elemento más afecto siem- olvidado también, entra otras verdades,
única manera de ser posible en los dias pre por su propia natural» za á todo lo estas:
que corren, para los pueblos en que su antirevolucionario y antiliberal. Por eso Que los radicales eran sinceramente
acción propagadora ha penetrado, para se vio obhgado á abdicar Don Amudeo republicanos el 11 de Febrero;
los pueblos que su influencia ha someti- de Saboya y por eso la nación recogió Que á la salud de la República conve-
do. La democracia es el derecho; el dere sus poderes proclamando la República. nia que lo fuesen con maycr sinceridad
cho de todos y de todo couciliado en esa La República pues no ha sido otra co- si cabe después de esa fecha;
fórmula suprema que se llama la justi- sa que una nueva fase do la revolucioH Que el exclusivismo en política es una
cia. La democracia no es el gobierno de de Setiembre y una nueva victoria de mala pasión y el aislarnient) un princi-
una clase, sino el gobierto de todos los los principios democráticos. Ellos ia han pio de muerte para las situaciones que
ciudadanos. En su seno no puede haber traído, ellos la han hecho posible y la nacen y aspiran á desarrollarse con graa
sino consagración para todos los atribu- han aclamado; ellos, si dentro de la R;- vida.
tos de la personalidad, res[)eto para to- públiea se les desenvuelve, mantiene y Solo habiendo olvidado esto los unos y
dos los intereses legítimos, garantía para respeta en todasu integriilad, la conso- los otros,—en amboscamposexisten lau-
todo progreso, orden y paz para todo lidaran impidiendo su caida. dables excepciones,—se comprenden y
trabajo, organización para todo elemen- Desde el punto de vista de los princi- se explican, aunque uo se justificarán
to, autonomía para todo organismo, ley, pios ese es el géaisis de la actual situa- nunca, su mutuo antagonismo, sus actos
en fin, para todo acto. ción; desde el punto de vista de los su- egoístas, el hecho incalificable de buscar
La democracia no es poderes absor- cesos hay que entrar eti otro orden de alianzas allí donde solo hay adversarios
ventes, tumultos en acción, menosprecio ideas para esclarecer las causas que la y el acto, más incalificabletíwju, de crear
del derecho, desbarajuste poütico. Jes- han producido. serios obstáculos á aqu»ti4'obra d é l a
concierto administrativo , violencia ni Sin que nosotros pensemos hacírlo es- cual puede decirse á republicanos y á
atropello de ningún género. Por eso la tensainente deberemos sin embargo r e - radicales lo que de Jesús crucificado di-
<lemocracia no está realizada; por eso la cordar qu" uno de los hechos capitales ce Lista:
democracia no es aún una verdad hecha producto del actual orden de co-as, hiisi- «Todos ea él pusisteis vuestras manos...»
práctica y que conozcamos porque haya- do la política de los eleineutos más avan-
mos experimentado sus efectos. zados de entre las parcialidades monár- Por defectos de todos y por culpa ma-
No: la democracia no ha sido todavía quicas, la política d>;l partí lo radical. No yor de los radicales, que al fin obliga-
gobierno. La revolución de S.'tiembre quiso óno pudo la monarquía electiva,— dos estaban al acierto y á la mesura, te-
trajo ia misión de plantearla; pero plan- que esto no está aun bien comprobado,— niendo alguna práetiei eu esto de las
tear un sistema no es obra de un dia, so- seguir aquella política; deestedeieo ó de cosas del gobiiírno, nació el antagonis-
bre todo cuando en el país donde se trata esta fatalidad nacicrou couuicioaes que mo. Di^sarrollaron-;j mil incid ntes va-
de plüntearlo exúste una orgariizacion an- hacían imposible la coexistencia de am- rios, y á la postre el recejo tornóse en
tigua, arraigada y contraria á aquel sis- bos elementos; vino, pues, laluciía, y el enemiga, la animadversión en saña, y
tema, incompatible con aquel sistema. trono resultó defluiUVimeníe vencido. La en los altares de la R^ípúulica se juraron
Eso pasaba en España en 1868. Das lo revolución pues continuaba y continuaba odio eterno los que ^^^ababaii de consa-
el Poder Ejecutivo, con sus múi'iples y á p.isüs cada dia más rápidos hacia e¡ ñu grarlos. ¡Torpezd iuaigue y iamentable
diversas ramiticaciones, hasta el judicial, de su übraqnenoesla obrade uu dia, ni ipie sabe el cielo lo que costará á la li-
—el que debe preponderar üentio de im de un año, ni de pocos años, dentro de bertad y á la patria!
l>ueblo libre,—todos eran de ua modo uu país, como el nuestro, tan profuuda- lu capaces los radicales por sí solos
absoluto y completo refractarios al nue- mente conturbado y en el que so!o rui- de dar la batalla á lasitmcion, .se inició
vo orden de ideas. Necesitábase para tro- nas se contemplan dentro de la esfera uua espacie de inteligencia con el resto
carlo todo algún tiempo y voluntad enér- política, económica y social. de las oposiciones, y viose á HI^'UUOS de
gica y perseverante. Varios hombres, ¿Qué deberes impuuia este nuevo paso aquellos que eu dias no lejanos sa mote-
méíiOB por su número que por su deci- á todos y á cada uuo de los que contri- jaran cruelmente, acudirá uu puuto pa-
sión, acometieron e.sta tarea, y estos buyeron á que se diese? Eácil es averi- ra unirse en el desarrollo de empresas
hombres han escrito en la historia con guarlo, si se tiene eu cuenta el seutido comunes.
caracteres indelebles la política de nues- cou que.vino aquí la Repiíbüvia y la di- Si estas inteligencias [)rodujeran como
tros últimos cinco anos. rección de los sucesos últimos; pero, tan efecto y tuvieran como móvil hacer me-
Cuando esa historia se conozca podrán fácil como es averiguirlo, fué difícil se- nos ásperas las relaciones entre los par-
apreciarse las dificultades con que lucha- guir los consejos de la lógica y b^s lec- tidos, nosotros las aplaudiríamos, que no
ron; á nuestro propósito basta con hacer ciones del pa'triotispio, y pur eso acaba hay á nuestros ojos nada tan graude, ni
constar que hubo dificultades, y que su de ser un hecho triste y dolorosísimo la tan digno, ni tau merecedor de toda
trabajo se limitó á esparcir en diversas jornada del dia 23. suerte de lauros como el perdón de las
 LA AMERICA. AÑO XVII.—NUM. 8.

ofensas y el arrepentimiento de las-cul- á que seinaagure una situación tirante ba pública y solemne (te, ,.esHa)fGion y pensa que un gobierno ¡uedeacordar en
pas, y la concordia y la armoniaí pero 8Í, pero que podrá mantenerse bien hasta agradecimiento, ha maátíadó hacer de obsequio de los buenos servidores de la
¡ah! por desdicha ya noignoramos el se- después de ^abiertas las Cortes j, en las ella una elegante edición ofleiíl, que es p a t r i a ^ en honor de sus talentos.»
creto de determinadas intrigas, ni la cuales al.principio no dejará de arrastrar la que tenemos á la vista; digna de ser Estos documentos, donde se tributa
suerte que á la libertad ai.á la páfriai se yOluníades, un pensMniento de buena imitada es la conducta de aquel gobier- tan justoaplauso á la obra del Sr. Ai-
depara en ellas; y esa que comenzó bajó aínaonla entre los republicanos federa- no, y merecedoras de alabanza son las berdi, daii á conocer claramente una de
el nombre de inteligencia, que muchos listas de las dos tendencias. ideas y sentimientos que brillan en los las causas principales de su particular
radicales aceptaron y que muchos con- Esto sucede en la esfera del partido documentos oficiales que insertamos á importancia. Su obra, en efecto, aparte
servadores aplaudieron, destinada está, gobernante: fuera de ella las consecuen- continuación: de! valor científico que no puede menos
si la Providencia no aparta de nosotros cias del decreto de 24 han sido otras DEPARTAMENTO BÍL INTERIOR. — Pana- de reconocérsele, es además una exposi-
este cáliz deamargura.ádardias de luto muy distintas. El retraimiento de la vida mék 14 de Mayo de 1855.— «Convencido el ción completa de las leyes políticas vi-
á la República y á la libertad. activa y de la propaganda legal es la gobiemo nacional de la benéfica influen- gentes en la República Argentina, como
La inteligencia puede llevar á la coa- consigna que se anuncia entre los ad- cia que ejercen en la opiníou pública los que sus trabajos se tuvieron muy eu
lición, y dentro de la coalición el triunfo versarios de la República y los que aun escritos sobre política y derecho público cuenta para establecer la organización
será lógica y necesariamente de los ele- no confesándose tales, acabarán por ser- argentino dados á luz por el ciudadano liberal y completa quese dio á aquel país
mentos más re/ractarios á la democra- lo á juzgar del camino que toman, ca- D. Juan Bautista Aiberdi, deseoso de después de la caida de Rosas.
cia; que las cosas caendd lado hacia el cual mino que insensiblemente conduce á hacer una manifestación solemne del Pero difícilmente alcanzaríamos á dar
sé inclinan, y la reacción ama con amor procurar dias tristes á la libertad y á la a|.recio que merecen los servicios desin- una idea cabal de la influencia ejercida
invencible á todo aquello que es coníra- patria. teresados y espontáneos, quí!, coDáo pu- en la Constitución de aquel pais por el li-
rio á la justicia y al derecho; á la demo- ; Tenemos, pufls, como síntesis de estos blicista, ha prestado á su patria el mis- bro que nos ocupa: dejemos hablar al
cracia, en una palabra. •días al escribir la presente REVISTA, que mo ciudadano." .,'\. i autor, y oigamos lo que él mismo dice
el partido radical, no comprendiendo el Y con él fin dé estimular los talentos sobre este punto en la eilicion de 1856;
III. carácter de la República ni su misión á contraerse á trabajos de igu*l natura- «/.as fiases, libro publicado eu Chile
dentro de ella ha contribuido á que se le leza, tanto naás necesarios cuanto es re- en 1852, ha tenido parte en la Constitu-
Se concertó, pues, Ja'inteligenciacomo infiera una grave herida y que merced á cíebte el esiabiecimiento de las in'stitü- ción general, sancionada en 1853 por la
ciones constitucionales en la 'República Cijiifederaciou Argentina. Basta leer su
base y la caida del gobierno como fin. este hecho anómalo, la ¡iolitica ha toma- íH'getitiíiM. ':í ,; ; 3 texto, inserto aquí de apénrlice.
Reí-pecto á los mtdios para obtener é?te do un rumbo ptfpgroso á cuyo fia se
y á ¡a organización del poder después de anuncian con bastante fundamento nue- El vicepresidente d'e l a Confederación Kl derecho público provincial ha tenido
la victoria, existia alguna variedad entre vas conturbaciones y una nueva época ha acortterto X"^'^'^'*^ {
^ la suerleTfe verse^ adoptado en su mayor
Jos partidos oposicionistas. Bgena á la paz y á la frusquilidad que «Articulu 1.° DeposíteseJ-^^ los 'ar- parte jK)r las Constituciones locales de la
Según nuestras noticias dos eran prin- el país desea. chivos "públTcas'Té la "McaóTTi^üli^^jem-' provincia. La legislatura de Mendoza
cipalmente las íórmulas que dentro y piar autógrufu dé cada uno;d¿ los si- decretó un voto de gracias al autor.
fuera de la ccmision se agitaban y sos- guientes esaitos del Sr. ¡D. Juan Bau-
tista Aiberdi: -— • - El sísiema eeonúniico y rentislieo de la
tenían por hoijibies y grupos importan- ^Gonstitvcion ha sido seguido de la abro-
tes. Parece poco posible exponerlas con En la segunda semana del mes actual "Bases y puntos de i artida para la
gación de leyes orgánicas, que déroga-
exactitud dada la ignorancia en que aun el miuistro de Hacienda inglés ha pre- «orgau.zacion j^üblica de Ja' .República Ban sin malaintericiüu principios funda-
se está acerca de esos íucesos; porlot[ue sentado al Parlamento británico las cuen- «aigeutiua.»
nos limitaremos á indicar que una de tas del año corriente y los presupuestos «Elementos de Derecho público pro- mentales de libertad industrial.
La integridf^d nacional se reimprime
ellas, tegun de público se dice, queríalos para el próximo. En las cuentas del año «vincihl jiara la República áigentiñá:» hoy día, teniendo por apéndice la revo-
preparativos militares como medio de actual (1872-73) resulta un sobrante de «Sistema económico y rentktico de-J*
cación de los tratados domésticos que
II iunfo y cerno poder próximo un gobier- 5.895.000 libra.--. Este sobrante se repar- »Cun¡edeiaciou argentina.» com{ nmetían la unidad de la Repúbli-
no radical conservador ó solhmenle radi- te entre una rebaja en los gastos que im- «De la integridad nacional de la Re-
)>[>ública argentina, bajo todossus gpt ca Argentina; y áu más importante re-
cal. (En este detalle hay variedad de ru- porta 1.167.000 libras y el resto por au- sultado, pendiente todavía, no tardará
mores.) La otra tendencia, más pacífica, mento sobre lo presupuestado en las ren- »bieriios, etc. etc.» ' ]. '
en Verse ^eaiiz.íido por la reunión de to-
iba solo á Lataflar por los medios parla- tas de aduanas, sello, consumos, telé- Art. 2.* Hágase á fespensas del Teso-
dos'los pueblos argentinos, sin escep-
mentarios, lo esperaba todo de estos y si: grafos, correos éincome laX: Para el año ro nacional una edición esmerada de cion de ninguno de ellos.»
Jórmula era un gabinete de conciliación próximo se calcula un sobrante de cada una de éstas obras, én número de
ti es niii ejemplares, poniéndola mitad de Aun estos mismos trabajos eran en
entre elementos más avanzados del radi- 4.476.000 libras. ellos á disj üsicioü del autor, quien será cierto modo incompletos, porque, como
cali.'^mo y ciertos elementos más pruden- No es tan satisfactoria aunque es bas- observa muy bien el Sr. Aiberdi, en el
tes del partiao republicano íederal. tante buena dados los úitimos tucesos de invitado á dirijir dicha edición.
Directora la primera tendencia de los su historia, lasituacioneconómica en que Art. 3 ° El presente decreto se comu- rápido movimiento que se iba oj^erando
sucesos hizo fracasar su propio plan. El se encuentra Francia. En sus presupues- nicará al intensado con :a firma abló- en aquel paisa l'avur de las ideas de li-
gobierno advertido nombró en las pri- tos, recientemente presentados, se hacen y del ministro grafa del presidente de la Confederación bertad, los legisladores llegaban más
Oel luttrior de la misma, adelante que los publicistas, y los hechos
mera.s horas de la tarde alguLos gene- grandes aumentos así de gastos como de acompañado de una nota oficial en que iban más alia que los publicistas y los
rales, los Sres. Hidalgo, Socias, Milans, ingresos para el año 1874 respecto de
se tsplane más detenidamente el espíri- legisladore.-^, y esos hechos, reflejados en.
Morlones y otros para que se encarga- los años anteriores. tu del jjreseiite decreto. la Constitución sancionada, no pueden
ran de mandos imjiortantes en la capital Grücias á la buena administración de explicarse por los libros escritos y publi-
Art. 4.° PuLliqííese, comuniqúese en
de la Re|.úbl¡ca; el Sr. Estevamz dispu- M. Thiers, á su celo por Jos intereses de los téiujínos arriba espre.-ados y dése al cados con anterioridad á ella. Por eso el
so así mK-^mo sus fuerzas y los batallo- la vecina República y á su indudable pa- registio nacional.—Carril, vicepresiden- autor ha revisado su obra, que es hoy un
nes de Voluntarios alectos al gobierno triotismo, Francia va poco á poco levan- te dtí la Coiiiederacion.—Ürquiza, presí- Comentai io completo de las institucio-
ocuparon los puntos más estratégicos de tánaose de la postración á que la con- deme de la Confederación. — Santiago nes consagradas por la Constitución y
Madrid. La batalla desde ent(ínces esta- dujera el imperio, y vuelve á ser una Dtsquí, ministro del Interior.» modificadas por los hechos, y al mismo
ba perdida para los que tan impremedi- nación poderosa, con grandes recursos tiempo un luminoso tratado sobre las
tadamente pensaron darla. Eí-te fue el y rehabilitada de su última y terrible la «Al .-eñor encargado de Negocios dei
Confederación Argentina, cerca de los cuestiones qu.' están todavía por resol-
hecho culminante y decisivo de la jorna- crisis. ver y que tanto interesan á la naciona-
da. La sesión de la permaUiínte, el dis- Una nube hay sin embargo en su ho- gübierno.s (it Fiancia, Inglattrra y Es- lidad Argentina.
curso del Sr. Rivero, las conferencias de rizonte. Los partidos monárquicos y paña, D. Juan Bautista Albénli;
Cábeme el honor üe adjuntar á V. S. Es, en fin, la obra, para valemos de
los unos, las idas y venidas de los otros, conservadores con mayor rej resentacion las palaliias del prefacio, «los mismos li-
la actitud de la antigua milicia; estos son en la Asamblea constituyen para la na- el decreto esj'tUido pur el Excmo. go- bres armados de nuevo para servir en la
detalles que el espacio no i,os permite ción vecina hoy un nuevo peligro y aca- bierno naciOLal de la Confederaciou Ar-
campaña de discusión pacifica sobre la
desenvolver como deteariümos y que hay so no está lejano el dia en que ocasio- gentina, en el que haciéndose justicia al necesidad del país y sobre integridad de
«fiemas que esperar se esclarezcan sufi- nando nuevos conflictos, prueben la mérito contraidu por V. S. con los ím-
cientemente. exactitud de esta profecía nuestra. poiiantes escritos que ha publicado, se su soberenia política.»
ordena la reimpresión esmerada Ue algu- Fácil es comprender, en vista de estas
Debe mos si consigua r una dolor osa pro- F. nos de ellos y el archivo autógrafo de indicaciones, los grandes estudios que
testa: las violencias de que fueron objeto sus originales. habrá necesitado hacer el Sr. Aiberdi
varios hombres políticos importantes, no Al comunicar á V. S. esta resolución, jiarn tratar con profundidad y deteni-
se justificaran jamás. Forman un cuadro me es grato manifestarle las razones que miento el cúmulo de graves y difíciles
sombrío y triste en el que solo hay plau- ORGANIZACIÓN POLÍTICA
la han motivado, y el espíritu que clu- cuestiones que abrazan la política y la
sible el celo de los que esputieron sus Y ECOKÓmCA DE LA CONFEDERACIÓN
mina en ella. administración de su país; comienza el
vidas por salvar las de sus amigos y ARGENTINA. autor por fijar las bases de una buena
tcmpfiñeros y la mesura relativa; pero Desde luego, los consideíandos de ese organización política, describe la situa-
siempre digna de encomio, que las ma- Bajo este titulo ha publicado el señor decreto revelan que el gobierno nacio- ción del Piala en 1852, examina con sin-
tas y el pueblo de Madrid observaron doi Juan Bautista Aiberdi, encargado nal, al proponersellenar un deber de jus- gular elevación filosófica el carácter his-
con aquella.s víctimas de nuestras discor- de Negocios de la Confederación en Pa- ticia premiando esos servicios que c-n tóiico que (li.-tingue especíalmenteel de-
dias civiles, dignas á la veruad de mejor rís y Londres, un libro notable bajo má.^ tanta espontaneidad, con tan laudable recho constitucional del Sud de Améri-
suerte. de un aspecto, en que examina con un desinterés ha prestado V. S. al [laís con ca, y expone y aprecia las Constitucio-
tiLo y lucidez admirables todas las cues- sUs escrito , ha querido darles también nes de Chile, del Perú, de los Estados
IV. tiones más importantes para aquel pais una publicidad más extensa, que haga que form-irou la> Repúblicas de Culoni-
y aun para otros Estados de América; la generalizar sus doctrioas é inocule en el bia, de Méjico, d i Uruguay, del Para-
ánimo de los pueblos las sanas máximas
El dia 24 apareció en la Gaceta el de- especial y reconocida competencia del que revelan sus principios. De este modo guay, y de California.
creto disolviéndola Comisión déla Asam- Sr. Aiberdi en las materias en que se se facilita más la ejecución de los pi opó- Del examen de estas Constituciones,
blea. Las fracciones más avanzadas del ocupa, su estilo claro, elegante y cor- sitos que inspiraron á V. S. la idea de de su cnmpBTHciou detenida y juiciosa,
federalismo creyeron que ese decreto era recto, la novedad y la abundancia de sus escribirlos, y se estimula al mismo tiem- de las observaciones im¡)ortautes que le
un signo de su poder y de su influencia datos, la elevación de sus ideas y la po, por este medio, los talentos de nurs- suministra su estudio, deduce el Sr. Ai-
y se arrojaron á ejercerla por todos los tXííCtitud de sus apreciaciones, reco- iro país á contraerse á esa clase de tra- berdi una séiie de consecuencias para
medios que les era dado. La combina- miendan por útil y necesario este libro á bajos de que tanto necesitan nuestras aplicarlas á_ la organización política de
ción fracasó sin embargo y el mini^te todos los que siguen con interés la mar- nacientes instituciones. su país, y tija los principios y determina
rio, contra lo que decían sus enemigos cha de los sucesos en las Repúblicas el espiíitu que debe dar vida al nuevo
y algunos de entre fus adeptos espera- hispano-amerícanas, y nauy singular- Consultando esos grandes intereses, \ deri chu constitucional del Sud de Amé-
ban, se limitó á conservar su posición mente á los que se consagran al estudio el decreto mencionado ha venido también rica.
neutra é intermedia manteniendo intacto, de la administración y de la política. á constituirse en fiel intérprete de la Pasando en seguida á otro orden de
en espera de las resolucíunes de la Cons- Creemos, pues, prestar un verdadero opinión que ha saludado siempre con consideraciones, confiesa con un valor y
tituyente el depósito de la soberanía po- servicio á la ciencia, contribuyendo á aplauso la aparición de esos escritos con una sinceridad que le honran, los vicios
pular. Acaso le creó esta conducta gra- generalizar el conocimiento de este libro, que ha ilustrado V. S. las cuestiones ca- y lo.s inconvi nir-ntes de la posición en
ves dificultades y serios compromisos y dando una idea, aunque breve é in- pitales de nuestra actualidad. que se encuentran las Repúblicas hispa-
La proximidad de las elecciones sin em- completa, de su contenido. Estas consideraciones dan al expresa- no-americanas, y estudiando el sistema
bargo, la ausencia de verdadeías fuer- El gobierno de la Confederación, apre- do decreto el mérito de la justicia, y es más á propósito para poner fin á los ma-
zas en pro del llamado partido intransi- • ciando como debía la obra del Sr. Aiber- de esperar que V. S,, apreciándolo así, les que las aqut-jan, manifiesta, muy
gente y otras causas, han contribuido | di, y deseando dar á su autor una prue- se sirva aceptarlo como la única recom- acertadamente . n nuestro concepto, que
 CRÓNICA HISPANO-AMERICANA.

lycs de encoutrarle ea la monarqiil^^ vigentes en la. materia, y aplicándolas 4 nes con los intereses extranjeros de na- La deshimra es triste cosa, pero puede
es la pejiúblicfe el único .sistema corrí- la piedra de toqué db los principios de- vegación, dé comercio y de paz, demues- hab^r'circunstancias que atenúen sus
í)!atible' con los háWtó8,,la$icleas, losséü- terminatios en la parte ariteríor; y for-^ tra que Sstáfeeehíaípara atraer á 1* Eu- efectos, y aun eximan de culpa al que la
titnieutos y la\civilizafciüii cié aq'uelloB m ü l a ü d ó e o l á tercera, coil arregló á' ropa, al contrario de las otras, que se sufre. Cae, por ejemplo, la deshonra ea
países, '"'' ' •• . aquellos miátoós pifincipiOs, un proyecto hicieron pari^ AlejsíPla., , - una mujer que ha sido víctima de la sa^
En seguida/con un espítitu, di&i-ecn-' dé'Gonistitticion. para la provincia de ¡Notable adelanto, que hace honor al duccioü, delengaüb ó de la violencia;
tud y de TmpacCialid^d .taú apreciálle M'errdozá' »ifÁi(5able-*ái las wjmás con las gobierno de aquella República, y que los desórdenes y vicios de los hijos aoo
como raro, el autor del ^"bro que tixadii- modifiéaCioíies eligidas por laS circuns- acredita Ik influencia del espíritu civili- deshonra de sus padres, culpables solo de
namps, sin dejarse llevar de las gréoeu-* tancias^és^éctivái de carácter local. zador de tiúestrosíglol ' •' • haber descuidado su educaciun, tal veas
pftcíones nacionales (ie otros esci'itores De suertfe'qué tíl método de estelibito La, integridad nacional de la Repúbli- por ,naal f.nteudido cariño.
ainericanos bace una completa justicia á es',tan ¿laróctimó üeñcillo; porque em- ca argehtina,!fi^rüpósito délos tratados A]un siendo voluntaria la deshonra, sue^
los beneficios dispensado^ á 1» América, pieza'el autot por investigar los buenos domésticos de Buenos-Aires," es objeto le a(lmitir,reparacioü.
p e r l a Europa, y reconoce: los buenos priheipios, critica la leg:i^acion existen- del último libro de la obra; las cuestio- La afre/iía es, ea un sentido, la misma
efectos producidos en -el Niíevo'Milndo te en cuanto no'se eóbwrma con ellos, y nes que se tratan MÍ él, si bien impor- desfeojwa caando dura mucho y se hace
por la acción civTtlZiíatira del antiguo. fortáula déipüestoa ilueVá, á<jue aque- tantes, son de un'interés menos general, pública; pero, en'otro, no procede tanto
' La inmigración y los medios dé fo- llos'mismos principios sitveü de basei y y afectan especialmente á las relacioües daia c^ilpa propia como de la ira ó de la
Inentarla, los tratados extranjeros, la to- fundainénto: eü éste libro, lo mismo que de la conféderáci(3ii con Baenoá-Arres. malignidad ajena, y con producir, racio-
lerancia religiosa, los ferro-carrilee, la en el 'de las -fiases, las aplicaciones acom- Su tendenciaaltíimente-patriótica, está nalmente hablando, menos desdoro que
navegación fluvial, las franquicias, la pañan á la teoría; detrás de los axiomas reasumida ea eístaspalabras de sú con- deshonra, hiere más en lo vivo, saca de
legislación como medio de ebtimular la viene feiempre !a demostración. clusioii: ,,' ' quicio a\ afrentado y le excita poderosa-
población, son las materias de que se Hay otros dos', llbi'os en esta obra: el «La intt^ridad polítiíía argentina' es mente á la venganza. V. g,; llamarle
ocupa en otros artículos. ' uno és úná exposiciou completa dé todo la'^afantia de su libertad fluvial y de &.uno villano, aunque lo sea, ó de otro
Descendiendo luego de estas cuestio- el sistema económico y rentístico de la comercio; lá llave déla paz interior; modo, que le rebaje en la consideracioa
nes generales, á las que interesan méá Confederación Afgetítina, contenido en la barrerá contta las aspiraciones del de los que lo oyeu, es afrentarle, y no se
-particularmente á la Coíifederación, fija la |Constiiucion de J853; este libro es kl- Brasil; la salvaguardia de su independen- lo infiere menor afrenta dándole coran
iás bases para Ja Constitución de la Ile- fament|8 notable por que eu ningún país cia oriental; la anif(j^rmidad de sus tari- populgan bofetón. Semejantes agasajos
pública Argentina, determina sus fines, de Eaíopa m de América, se observa el f aá; la umón de la navegación atlánti- encienden la sangre del más pacato, mo-
proclama, en lo cual no estamQs'ientéra- fenómeno de que los ligisladores acep- ca con el fluvial: fa garantía de la paz y viéndíjle á vengarse tan pronto como
íaeute conformes, que la unidad puru 4S tando y recogiendo los principios de lá de la riqueza de Buenos-Aires; la solu- pueda y del modo, noble ó no, que esté
-imposible, precisa el origen y las cansas ciencia económica, los hayan reducido á ción misma de la deuda pública.» á s u s alcances. Si el así sonrojado es
de la descentralización de la República, fórmulas legales é incluido como p^rte Eu resumen, la obra del Sr. Alberdi, hombre de armas tomar, ya so saba qué
6e declara por tina fedefacion compues- integrante de su Constitución^ en aque- importantísíma como libro de ciencia, y género de satisfacción exige.
ta, centralista y unitaria á la vez, Jr da lla Cousútucion se garantiza la libre ac' notable como libro de estilo, coloca á su Hubo un tiempo, .y poco dista todavía
una idea jiráctica de cómo debe orgaui- don del trabajo, del capital y de la tierra autor á una gran altura sobre el córaan de nosotros, e» que segua las leyes re-
-zarse el gobierno, en la cual demut^tra como agetitesprincipales-de ía producción. de" ios publicistas; hoy no hemos podido sultaba infamia de ejercer ciertos oficios
y aprovecha sus grandes e&tudios y su El Sr. Aiberdl ha metodizado en su libro, hacer otra cosa que dar una ligera idea aunque personas muy honradas ganasen
especial conocimiento de los gobiernos presentándolas bajo un si.stema claro y de su contenido; entrar en apreciaciones la vida con ellos. Esta infamia legal ya
del Norte-América, Suiza y Alemania. metódico, las disposiciones relativas á más amplias, discutir algunos do los ha desapax'ecido, ó nos quedan pocos
El examen de otras varias cuestiones estos objetos, dividiendo su trabajo en puntos interesantes de que trata, hubie- rastros de eUa; pero subsiste y subsisti-
políticas y administrativas, entre las que tres partes: eu la primera examiua las ra sido mUy largo. Acaso otro día em- rá la que nace de acciones viles sobre
-descuella la relativa á la población, tan disposiciones relativas al fenómeno de la prendamos esa tarea. criminales, merecieudo aun mejor tal
vital para aquellos países, ocupa en se- proí/Mcdon de la riqueza; espone en la se- calificación la conducta habitualmente
CisTiNo MARIOS. fea y deshonrosa de un individuo.
guida la atención del publicista, y ter- gunda los principios que se refieren á la
mina la primera parte de su obra. distribución, y consagra la tercera al es- Sin duda porque infamia é ignominia re-
La segunda parte es un proyecto de tudio de cuanto hace relación al fenóme conocen una etimología muy análoga
SINÓNIMOS CASTELLANOS. (pues allá se van falla de fama y falla de
Constitución, que comprende los princi- no de loa consumos públicos, ó lo que es lo
iios, derechos y garantías fundamenta- mismo, á la formación, administración nombre; esto es, de buena fama, de buen
f es, y la organización, límites y facul- y empleo del Tesoro nacional.
tades de los poderes públicos, que según
ADOPT.ÍR, PROHIJAR. nombre, que es lo que literalmente signi-
fican estos v(x;ablos), se usan como si-
No se limita á esta el autor de la obra: Una y (Jtra voz significan que se aco- nónimos muchas veces, y diríamos que
el método de todas las Constitucionos estudiando la legislación civil de la Re-
modernas de Europa, divide en poder le- pública, que todavía es hoy puramente ge como propio al hijo de otro padre; pe- lo son, á no mediar entre ellos la diferen-
gislativo, ejecutivo y judicial. ro aunque para los efectos legales sea cia de tener el primero significación ae-
española, demuestra que es en grau
Así, la democtracion viene detrás de parte incompatible con la nueva Consti- igual la significación de ambos verbos, tiva y pasiva, y sólo pasiva el segundo.
los principios; las realidades de la apli- tución, sostiene que es de todo punto y aun parezca más adecuado el primero, S i vive en la ignominia ó en la infamia;
cación, (lf;[mes délas especulaciones de necesaria la reforma legislativa, ejecu- supuesto que de él se ha tomado la pala- pero se cometen infamias, no ignominias.
la ciencia. bra adoptivo, aplicable a l;i persona que El oprobio es, á nuestro juicio, la mis-
tada, con arreglo al espíritu de la ley
A continuación, y en prueba de lo fundamental, propone las bases de esa adopta y á la adoptada, y prohijar no tie- ma infamia y con ella las desdichas, pe-
mucho qne sirvieron sus trabajos para reforma, así en lo que tDca á las perso- ne un derivado semejante, nos parece, sares y vejaciones que son .su consecuen-
la organización definitiva del gobierno, nas como en lo que se refiere & las cosas, siu embargo, más caritativa, má8pafó)•(^a/ cia.
inserta íntegro un documento curioso; yentra con este motivo en importautes la. ACcion áe prohijar que la de adoptar. AGUANTAR, SOPORTAR, SUFRIR, TOLERAR.
la Constitución de la Confederación Ar- consideraciones acerca de la división de Quizá nos induce á creerlo así el estar Muy semejantes en su filiación latiua
gentina, .caucionada en 1853; quisiéra- las personas, de la potestad dominica y compuesta déla misma voz hijo y la par- los verbos s'jportar, sufrir y tolerar, se
mos dar una idea de esta Constitución, de la patria, de la muer e civil, del ma- tícula pro el verbo que preferimo.í por
emplean también im más de aua ocasión
pero no tenemos por hoy ni espacio ni trimonio, de la tutela y cúratela, de los expresar mejor la idea. Kilo es que las como sioóuimos. Decimos, por (ejemplo,
tiemro sino para bosquejar brevemente límites que han de designarse á la pro- gentes sencillas y de recto corazón opi-
indistintamente que no se puede soportar,
el croquis de la obra que examinamo«. tección legal concedida á los menores, nan del mismo modo. Desde luego, en- ó sufrir ó tolerar uua injuria grave, el
tre las del vulgo, que ó no haceii ciertas
Precedido de una luminosa introduc- mujeres é incapaces, y de otras cu.'stio- cosas ó las hacen de buena fe y coa toda tVio ó el calor escesivos, el yugo de la
ción viene en seguida otro nuevo libro, nes no menos interesantes que estas. cordialidad, no ha penetrado eso do tiranía, la insustancial y eterna chacha-
titulado: lílcmentos del derecho público pro- Con la misma elevación y buen juicio adoptar; y no porque este sea término ra de un necio, etc. Hay C(jn todo, uua
vincial ár(¡entino: esta materia, menos presenta ios puntos de oposición que más que rebelde que el otro á su viciada marcada graduación en el significado
importante, allí donde el régimen unita- existen entre el actual e.stado económico pronunciación; pues si la p en medio de de los tres vocablos. Tolerar es meuos
rio, esfablíTiendo un gobierno general de la República y de la América eu g e - dicción se les resiste, otro tanto les su- que soportar, y soportar es m ;nos que
para todo el país, deja reducida esta par- neral y el derecho civil romano, e! fran- cede con el pro k los quo siempre dicen sufrir. "•
te de la legislación á la organización cés, las Partí las, el Fuero Real, la Re- porhijar, sino porque la misma expre- Tolerar no se aplica k objetos materia-
política y Mílrainistrativa de la provincia copilación indiana y la Recopilación cas- sión, como hemos dicho, > testigua grá- les. No se dice, v. g., que un asno tolera
y del ffiunicipií), éslo mucho en los pue- tellana; hace de paso la observación uo- ficamente su buena obra. sobre sus lomos quince arrobas de carga,
blos, qufi como la Confederación Argen- tabilísima y exacta de que el antiguo Auníjue la mayor parto de las adopcio- ó doce sobre sus hombros un m izo de
tina, están gobernados por el sistema derecho civil español guarda absoluto nes son generosas y desiateres;vdas, las cordel; para tales pruebas de fuorza físi-
federal lín loa gobiernos unitarios, una silencio sobre la producción industrial, hay también sin esta laudable condición; ca hay otros verbos, y entre ellos sufrir.
sola ley orgBiiiza todas las provincias de que es sin duda alguna el más perfecto mas de uua «e ha liecho por razíjn da Tampoco en sentido moral se estieade á
que se compone un Estado, fija sus atri- (le entro los modos originarios de adqui- estado entre príncipes y magnates; m4s todos y á todo la acción de tolerar: para
buciones y determina sus relaciones con rir de los tiempos modernos, y después de cuatro se han comprado con el dine- ella se requiere las más veces alguaa
el po 1er central; pero no hay más que de examinar cuál es el mejor medio de ro; y eu uno y otro caso, ó por reü la- superioridad de parte del que tolera res-
una G'on^ litncion política, cuyo espíritu llevar á cabo la reforma, se decide por el miento de cultura, ó por ausencia de ca • pecto da la persona en quieu ejerce la
ha de refleJHrpe en las otras leyes; en los de leve.s especiales, con preferencia al de riño, ó porque así entienden cubrir mn- tolerancia; y cuando así no es, so entien-
gobi. ruo.s íei'i'rüles, además de la Cons- la codificación general. ¡or el expediente, como suele decirse, los da una de do.^ cosas; ú qua no hay com-
titución genrrñ!, hay una Constitución La organización civil de la República que cargan con agena prole, prefieren (leta couforinida 1,0 queaun habiéndola,
paia cada provincia, ó debe haberla —concluyeelSr. Alberdi—residecasitoda decir qué la adoptan á confesar que la puede, si quiere, no tolerar el quj tolera.
cuando ménoR, porque no puede dejarse en lo.'^. códigos españoles, y pertenece al prohijan. (Jii padre, un mae.stro, na j iíb toleran
al arbitrio de la costumbre al determi- tiempo de los reyes absolutos; es preciso, por natural bondad, por efecto de las
nar con la precisión conveniente, lo que pues, operar la reforma por uno de dos La aplicación que en ,seutido figurado
circunstancias, ó por evitar mayores
debe ÍÍCV objeto de la Constitución gene- modos; ó por el despotismo imperial, im- tienen ambos vocablos corrobora nues- male.-^, faltas ó culpas que podrían (jasti-
ral, y lo qne debe serlo de las Constitu- posible en aquel Estado, ó por hi.s autu- tro dictamen. Adoptar una, idea, una cos-
gar, hnxi entre iguales &e toleran asimis-
ciones de provincias; lo que corresponde rizaciones dadas al poder legislativo; el tumbre, es menos que prohijarla-, lo que mo, por amor á la paz ó por otras consi-
al gobierno central y lo que pertenece al autor encarece este último medio á que ,se adopta, se admite con más ó menos deraciones, no pocas incomo lidades é
gobierno de las localidades; solo así, debe Chile sus grandes reformas, y á gasto, y á Vfíces por necesidad ó por iranertinencia-A: el inferior nunca tolera;
como dice el autor acertadamente, pue- nosotros nos parece, sino el mejor, el mandato superior; lo que se prohija se ó .se rebela ó sufre; y áua méuos los ani-
den evitarse '».« invasiones del derecho único posible á lo menos, porque el ha- considera como propio, como identifica- males, privados del raciocinio en
provincial <.'n el terreno del derecho na- cerla en el Parlamento, que es el medio do con el prohijante, como nacido de él. siemiire estriba la tolerancia.
cional. verdaderamente legal, daría ocasión á AFRENTA, BALDÓN, PSSaONRA, l.NFAJIIA, Soportar conserva el espíritu de su ori-
E^te t; niio (le los males existentes en (¡ilaciones y entorpecimientos que le ha- IGNOMINIA, OPROBIO. ginal latino (supportarc) eu su material
la Coufi'dcracion á que quiso poner re- rían punto menos que imposible, y que- El uso no puede hacer diferencia en la acepción, que equivale á agíianlar,llevar,
medio el Sr. Alberdi con la publicación braataria de cierto, á favor de las en- aplicación de estos términos al descrédi- portar sobre sí algún peso. Sin embargo,
de este libro: por eso le divide en tres mieijdas y modificaciones á que tanto se to de una persona ó familia cuando gra- excluye eu la práctica, como tolerar, t5.s-
partea, iuvpítigando en la primera las presta la discusión, la unidad que debe vemente las afecta. Entendemos, sin em- te primordial concepto: no se soporta un
iueutts y los orígenes del dereclao pú- presidir á las obras de esta naturaleza. bargó, que el baldo7i consistelmásbienea baúl sobre las costillas, y aunque algo
blico provincial, y resolviendo las cues- Brillante es el apéndice con que ter- ser blanco de ultrajes é injurias (y tam- quiere materializar la idea el yerno que
tiones de derecho constituiente; exami- mina este libro, eu el cual considerando bién á las injurias se les llama baldones) se queja de no poder soportar á su sue-
nando en la segunda las instituciones la Constitución argentina en sus relacio- que en haberlo merecido. gra, no es uu peío corpóreo, siuo su
 LA AMERICA.—AÑO XVII.—NÜM. 8.'

perra condición lo que le abruma. 5opor- tamento análogo, para indicar que se Los firmantes del manifiesto se adhie- Máximo, uno de loa príncipes asistentes
tar en £u aplicación á cosas no morales, hace vida regalada, ó mezquina y mise- Tm el .nombramiento de M. Barodet, al solio pontificio y que descendía del
alude á otro género de fatigas ó priva- rable. porque en su sentir espresa las ide,a8 por gran romano Favio íláximo Cunctator»
ciones, como el andar demasiado, ó ca? AMAGO, AMENAZA. las cuales desearían ver guiado al go- el gran capitán de las guerras Púnicas.
var, ó remar, ó cualquier otro trabajo bierno en BU conducta, y ^ t á p persua- Aunque su hija estuvo casada con el'
corporal, incluso el mismo de sostener El amago, cuando se trata de vías de didos de que la causa de la República si^ prípcipe de Cariijan, tio de Víctor Ma-
cosas pesadas, aunque sin precisarlo, hecího, consiste precisamente en la ac- baila ligada con la de la elección de nuel, .siempre fué.fiel alPontífice y con-
r el hambre, la sed, el insomnio, el do- ción; la ameMoz-a, más bien en la pala- M. Barodet. Los firmantes piden con este trario al rey de Italia.
5 or etc. Se soportan también, ónose sopor- bra, aunque á veces Vaya acompañada motivo la disolución de la Asamblea ac- Tanibien ha fallecido la condesa Tere-
tan, las adversidades y flaquezas del pró- de la acción. No hay amago en la amenaza tual y la convocación de una Cánpara sa Sparn, que disfrazando á Pío IX de
jimo; pero no ya de tan buen grado co- de desheredar á un pariente, de desti- constitucional que proclame una ampis- mujer lo salvó cuando el destierro & G&é-
mo cuando se toleran, ni con la paciencia tuir á un empleado, de poner por justicia tia, levante el estado de sitio y funde de- ta. Ha dejado toda su fortuna á un mo-
y resignación del que sufre algo que le á un deudor; no ie hay tampoco en la de finitivamente la República. nasterio de Viena.
agobia el cuerpo ó le aflige el alma. apalear ó abofetear á alguno, á menos Los conservadores monárqpíco» pre-
Entre el que soporta y el que sufre sue- que aco'úipáñe á tan galante prome^a la sentan en frente de las candidaturas de Avanza extraordinariamente la perfo-
le haber el común concepto de la impo- expresiva demostración de levantar con- M. Barodet y de M. de Remusat la del ración del San Gotardo, el más alto da
tencia; pero dándola al diablo el primero tra ella el garrote ó la mano. Es, pues, coronel Stoffel En el. Alt» Vienne se los Alpes. Italia, Suiza y Alemania vaa
y llevándola por Dios el segunda. Sólo el amago una amenaza próxima á reali- presenta candidatoM de Laguei-onuiere, á enlazarse por esta gran linea, más be-
hay un caso en que no es ai cielo á quien zarse, una prueba manifiesta y visible en el puesto de M. de Saint-Marc Girar^ lla que la del Mont-Cenis. «
se ofrece el svftmiento, sino en aras de de cólera ó animadversión, ai paso que din, vacante por fallecimiento de este.
la codicia y la desvergüenza; lo común la simple amenaza no pasa de ser un avi- Hoy traerá ya el telégrafo alg "has Los príncipes .de Galles han atravesa-
es formular esta situación con el partici- so, poco caritativo ciertamente, pero que noticias. do París dirigiéndose á. la Exposición de
cipio pasivo del verbo sufrir, y usarlo deja siempre esperanza de no Verlo con-
Viena. En Mayo volverán á Inglaterra
como sinónimo de otros vocablos que vertido en un hecho, bien porque el ame- Cuando tan fácilmente se falsifican los con el príncipe heredero de Rusia, casa -
dicen relación con ciertos cuadrúpedos nazante no pertista en su propósito, bien billetes de Banco de España, es útil lla-r da con la hermana de la princesa de Ga-
rumiantes. poique desarme su ira el amenazado ha- mar la atención de este establecimiento lles.
Aguantar, verbo más familiar que los ciendo que cese el motivo ,de la amenaza. sobre un nuevo papel llamado de filigra- Los reyes de Bélgica van á Inglaterra
anteriores, tieue exacta sinonimia con Pero en otro orden de ideas, esto es, na que ha empezado á producir una fá-
cuando no hay peligro ni presente ni re- también El emperador deAlemania par-
sufrir, en cuanto á sostener algún peso brica establecida en San Petesburgo, tió para Rusia. La czarina va á Roma ea
material; pero poca ó ninguna en senti- moto de agravios, ultrajes ni golpes, ya papel espresamtnte aplicable á billetes Mayo, esp<erando allí al czar.
do moral, pues el que aguanta una inju- no tiene aplicación la palabra amenaza: de Banco y letras y que según las mues-
ria; un castigo, un daño cualquiera, ca- la otra sí, pudiendo ser favorable ó des- tras presentadas en la última Exposición Todo anuncia que la elección entre
rece de la virtud activa ó pasiva del que favorable, y aun indiferente su sentido. de Lóadres aventaja á lo mejor fábrica- M. de Remusat y M. Barodet, que debia
sufre. Con el que más semejanza tiene Así decimos, v. g.: «Através de sus am- do en Inglaterra. tener lugar el domingo 27, será muy dis-
en este concepto dicho término aguantar bajes y reticencias dejó ver fulano un putada. M. Cremitíux, miembro que fué
es con soportar; sin embargo, parece di- amago de oposición, ó un amagode aquies-
Según nos dicen de Viena, el l 5 de del gobierno de la defensa nacional, se
ferenciarse de él en suponer mayor mo- cencia.»— «Tuvo mengano conatos y Abril tutron recibidos por el emperador ha declarada á favor de M. de Remusat.
lestia, más marcado disgusto, y cierta aun amagos de declararse», etc. En estas y los archiduques en la estación mí.~ma M. Edgard Quinet, en un manifiesto en
humillación que á este, más que á sus locuciones ú otras parecidas no cabe la del ferru-carril que va á Munich, el príu- queacouseja á loa electores que votea
análogos, atribuimos, acaso por lo mis- vez amenaza, y cabe menos todavía con cii)e Leopoldo de Babiera, que acompa- por M. Barodet, dice que la candida-
mo que es, entre los cuatro, el más vul- referencia á ciertos accidentes que no ñado de sa padre, de sus hermanas y tura de M. de Remusat ha sido presen-
gar; que también hay gerarqulas en los dependen de la humana voluntad. Por hermanos ha ido á la capital de Austria tada con el objeto de ahogar la voz de
vocablos, y según ellas se mide, no sólo lo mismo se dice que ha habido un ama- para sus bodas con la archiduquesa Gi- París, y hacer de esta capital el cuartel
su respectiva condición en el estilo, sino go, no una amenaza de tempestad, cuan- soia. general de la reacción. Recuerda la con-
la mayor ó menor energía, ó importan- do la que anunciaban las nubes se ha Al siguiente dia de su llegada hubo ducta de los republicanos en vísperas del
cia, ó dignidad en las ideas que repre- reducido á un brev£ chaparrón, ameni-
sentan, zado con algunos relámi-agosy truenos; función de gala en el teatro de la Gran- golpe de Estado de 1851, y dice que por
se dice que el vecino tuvo anoche un deOj era,donde los palcos costaban S.OOu haber seguido la política presidencial,
ALTERNAR, TRATAR, TRATARSE. amago, no una amenaza, de periesia. reaJesy l.ÓOO rs. las lunetas. Los jóvenes trajeron la ruina de la república. El ma-
Alternar denota el trato, 6 sean las re- Convirtiendo estos sustantivos en ver novios e.-iaban con la familia ]ai¡)eria'l. nifiesto concluye diciendo que el triunfo
laciones de amistad ó meramente de bos, observamos, por el contrario, que Entreiasfiestasmás brillantes quesehan de M. de Remusat seria el primer paso
atención entre personas iguales, ó poco amenazar es de mayor uso y tiene más dado en Viena cou motivo de estas bo- hacia la presidencia del duque de Au-
diferentes en categoría. Asi, cuando en aplicaciones que amagar. Aunque el ama- •.as, refieren las cartas una gran sere- male.
el trato no media esta circunstancia; go sea en muchas ocasiones, como ya nata y retreta preparadas por los estu- Los diarios radicales citan los nombres
cuando no cabe en él la alternativa; esto hemos dicho, más enérgico, mas inme- diantes de Viena con las magnificas demás- de sesenta periódicos "de provin-
es, la reciprocidad de condiciones, se usa diato que la amenaza, su prefiere signifi- Piúsicas austríacas, las primeras del cia que se declaran en favor de M. Baro-
el verbo con negación ó en son de cen- carlo con el verbo amenazar; pueue de- mundo como es sabido, y que con un det. En París la banca y la Bolsa están
sura; V. g. «Yo no alterno con .'emejante cirse me amagó, pero comunmente se di- cü¡,cur.-o inmenso llenaban la plaza del por M. de Remusat, y se creia que solo
hombre.» —«No debes alternar con fu- ce me amenazó con uu palo, y nadie dirá palacio díl Buurge. En vez de hachas en dicho barrio sacaría 40.000 votos. M.
lano.» que una casa amaga, sino que amenaza, de viento ¡a iluminación era toda de fa Gambetta ha apostado áque M. Barodet
ruina. roles de colores. También habrían esta- obte.idrá 40.000 votos de mayoria en el
Tratar, en el mismo concepto de tener do brillantísimas las carreras de caballos primer escrutinio.
con individuos ó familias comunicación Amagar no nos dá ningún adjetivo que,
las primeras de primavera en el Prater,
más ó menos amistoía y frecuente, va- como inminente (que procede del inminere que cou moüvo de la Exposición presen-
ría de significación según se construye latino, padre del castellano amejíazür) ex- ta yH un cuadro animadísimo. Vnna va Los moradores de Sumatra en las In-
la frase; es decir, según la preposición prese lo que está á punto ó muy cerca de á aumentarse en medio millón de almas. dias holandesas están dando pruebas de
que sigue al verbo. Tratar á uno es sa- suceder. Y á propósito, como no faltan El duque de Osuna asistirá en represen- lo que puede el valor de un pueblo, aun
ludarle, visitarle, estar en buena y ur- escritores que á roso y belioso lo em- tación de España á la apertura de la Ex- cuando sea poco civilizado, defendiendo
bana correspondencia con él. Tratar con plean, bueno es advertir que inminente posición. su indepetidtncia. Aunque á costa de in-
alguno supone relaciones de mutuo in- no se adapta á cosa alguna apetecible y mensas pérdidas, han hecho retroceder
terés, que nsda tientn que ver con las grata, como uu ascenso, una herencia, á los hülamleses, que se hau visto obli-
En los Estados-Unidos, donde son tan
prescripciones de la amistad, y á veces una cobranza, la paz de. Europa, sino á frecuentes los siniestros, tanto en la na- gados á retirarse á los fuertes de las cos-
Di aun con Jas de la corte.-ia; además se las que nos dañan ó perjudican ó afligen vegación como en los ferro-carriles, aca- tas y al abrigo de su escuadra. De igual
completa el pensamiento añadiendo sobre ó martirizan, como la peste, la guerra, ba de ocurrir otro nuevo. Un convoy que manera los indios chodoks en los Esta-
tal ó cual asunto. Tratar un hombre con una la bancarrota, una nueva contribución, iba á Providencia se ha precipitado en dos-Unidos han escapado á las montañas
mujer, ó viceversa, significa, sin auxilio una asonada, los discursos de ciertos un abismo. Ocupaban el tren como burlando la persecución del general
de otro vocablo, que hay entre él y ella oradores, la lectur I de ciertos dramas, unas 150 personas. Se ignora el número Sherman.
trato atni roso, y generalmente se entien- la cesantía, el destierro y otras lindezas de muertos y heridos.
de que es mes íntimo que honesto. Tra- semejantes. Casi todos los negocios industriales y
tar de... es fórmula que espresa el trata- comerciales queactivamente se sostenían
miento que damos á una persona, según MANUEL BRETÓN BE tos HERREROS. Según noticias de Viena, se ha conce- entre Francia y España, están paraliza-
el cariño y confianza que nos inspira, y dido á España salón propio para colocar dos. Si grandes son los quebrantos que
sus productos de bellas artes. El espacio
según la obligación ó el respeto nos lo La candidatura de M. de Remusat iba mural es de 164 metros cuadradros. Su- los franceses sufren con esta paraliza-
prescriben, como tratar de tú, de usted, ganando mayor terreno cada dia en Pa- ción, mi^íures son los que han de sufrir
áe usía, ele. Dtnota también, según el rís, contando ya con el apoyo esplicito ponemos que aun no hay bastante espa- los españoles que giran eu un círculo
complemento que se dá á la cláusula, de M. Julio Grevy y del general Chanzy. cio para lo que va. mu hu mas estrecho para todas sus espe-
mayor ó méi or grado de desprecio ó A consecuencia de la adhesión de culaciones.
animadver.-'ioD; y asi se dice: le trató de M. Julio Grevy á la candidatura de Ha habido en París un principio de
ingrato, de impostor, de pillo, de hereje, M. de Remusat, la extrema izquierda de- crisis ministerial, promovido por el di.— La comparación del presupuesto fran-
etcétera Tratar, usado así, no se aplica cidió publicar un manifiesto en favor de curso pronunciado por M. Jules Simón, cés del primer trimestre de este auo coa
nunca á cesas íavorables: nadie dice M. Barodet. ministro de lustruccion pública, eu la igual época del anterior, presenta uu re-
íraíflr de honrado, de valiente, de gene- En ese documento, firmado por 31 di- S irbona. Una alusión que no podia me- sultado sati.-^factorio. Dichosos los fran-
roso. La misma construcción tratar de, putados, entre losque figuran Gambetta, nos de herir á la Asamblea, llamó la ceses, que después de una guerra ex-
cuando la sigue un verbo, tiene otras Luis Blanc, Edinond Adam, Edgard atención de otros dos ministros, sus com- tranjera y los horrores déla Común, des-
acepciones muy distintas de todaslas an- Quinet, Peyrat, Brisson, Tolain Esqui- pañeros, que han exigido se corrijan las pués de haber pagado una inmensa can-
teriores; tratar de hacer una cosa, es pen- ros, Challemel Naquet y otros, dicen es- mescionadas frases en el diario oficial, liilad por iudeainizacion de guerra y
sar, proponerse hacerla. Dícese también: tos que en un principio hablan pensado so pena de retirarse. Las frases se lian aprestarse á pagar lo que aun falta, han
«Se trató en lajunta de tal ó cual asunto;» abstenerse de intervenir en la próxima corregido: M. Jules Simón ha llevado á podido eu dos años restablecer dU ha-
esto es, se habló, se discutió; del mismo elección; pero que viendo que algunos bien esta corrección, y el principio de cienda.
modo se suele designar la materia de un hombres públicos se ocupaban cou calor crisis se ha terminado.
libro. de ella, creyeron deber salir de su inac- Hay fatales noticias de la salud del
Tratar á alguno bien ó mal es, en un ción, y animados de un espíritu favora- El general Bazame ha sido atacado de Sultán Muchos temen por su razón, que
sentido, mostrarle benevolencia ó desvío, ble al gobierno de M. Thiers, señalaron una bronquitis aguda. hau deliiiiíado los escesos de su juven-
y en otro, darle bueno ó mal trato en la á este el peligro de presentar á M. de Aunque por el momento la dolencia no tud Se atribuye al estado de sus facul-
comida y hospedaje. Remusat como candidato, aconsejándole ofrece cuidado, ha tenido que guardar tades meiitaies las crisis frecuentes de
Tratarse dos ó más personas es haber que no lo hiciese. El gobierno persistió cama. Turquía.
entre ellas mutuas relaciones sociales: en su propósito, y la estrema izquierda Tantos meses de prisión, por más que
con respecto á uno mismo, solo tiene considera que el carácter oficial y la sig- no sea muy incómoda, influyen al fin El príncipe Miguel, soberano de Ser-
signiñcacion este verbo,, unido al pro- nificación equívoca de aquella candida- sobre las fuerza» físicas. via, se casa Con una hija del gran duque
nombre personal, cuando se le agregan tura, no permitían á los republicanos Coustaniiiio de Rusia. Su hermana es
dichos adverbios bien 6 mal, ú otro adi- apoyarla. Ha fallecido en Roma el príncipe de reina de Grecia.
 CRÓNICA. HISPANÓ-AMÜÍÍÍCANA. d

LITE'iATüaA AME^RICANA. chas veces y Plácido algunas, se hacen principiantes como todos sabemos, por Mentirá parece que'en pleno si^lo xiií
dignos ..de este lauro. los descontentadizos preceptistas, que cáándo hasta la'teduoátíbn gratuita 4^
l*or sü condición humilde, y por su apenas hallan uno bueno entré los miles M ^ b t í e l a á dépáfVüléáaesaWolWeftloS
PLACIDO. carácter al parecer lijero, y maleable, de millones que sé han escrito. Treinta niños el sentiío'comiin'lo ménbs', .fJiSaÜ
(ARTICULO SEGÜJÍDU X UtlIMO.) debió serle á Plácido más üiflcil q u e ' á y ocho compuso.Plácido.nofse asombren imprinjirsaeste soneto en las bbras de íin
otro alguno alcanzar tan alta Victoria. nuestros lectores de este número, pero poetaáquiensequiera honrar. ¡Y seme-
La loca de la casa llamaba Montaigne A través del inmenso fárrago de sus no le alcanza aquello que dicen los críti- jante coleccionador se ha a1;revido á Ofen-
a l a imaginación, que con efecto suele poesías se descubre una naturaleza rica, cos de la desesperación da IQS poetas, der á los españoles y á España en la be-
conducir á los hombres de talento á_ pre- ún alma poética y tierna, un espíritu le- pues poco, muy poco habrán podido Itatíá^nota que'•reprodujimos en el á r -
cipicios en que no caerían si el criterio váütádo y otras idotes envidiabies; perb' desesperarle 303 treinta y ocho sonetos: tíeuló pritüBPoli ' • ' ' , '
sólo les guiara; y este axioma del más su faltí iie educación social y política,^— algo más le desesperaría el verlos im- Apartemos ya los ojos de tan repug^
profundo de los pensadores franceses re- teáléndo en cueíita sus tendencias revo- presos si viviese. nante cuadro,, que todavía por desgracia
cibe una completa sanción de'los poetas lucioáarias^unta con todos los carac- Dos, sin embargo, merecen absolución nos tocará dar ea él alguna pincelada
americanos. Dominiíén ellos la loca de la teres distintivos del genio amaricaao en general, que descuellan como' gigantes cuando pasemos revista al inmenso l ^ -
casa con tal omnipotencia, que es la su máá alto grado de desarrollo, le cer- ravelando loque el poeta de'Matanzas mfero.dé composiciones que ha debidb
fuente de todas sus'aberraciones, de to- rará, con tristeza lo decimos, porque es hubiera sido si alcanzase más vida y eliminarse de esta colección.
dos sus estravios. El clima y la sangre un poeta amable y simpático por sus des- más esmerada educación. Mn la muerte Con ella en la mano y leyendo.el .e.xac-
de consuno ponen á esa íaza nueva, de gracias, le cerrará las puertas de la pos- de Jesucristo titúlase al primero, que no tísimo epígrafe que el autor le puso:
de Dios y de la naturaleza tan favoreci- teridad. Venimosle dando hace años más es tan perfecto.como el segu-ado, titulado Ftores &úa de un iogéaio sin ciilttKa,
da, en k)s extremos limites las faculta- importancia dé ta que .tiene, porque los ' la muerte de Gesler, doude solo merece , Cftalla^íiueidao los campos de ni pitrja,
des humanas dond^ camina detrás de estravios de la loca de la casa son con- Censura el verbo prosaico y antígrama- ricp.sde olor, de tiqíesy hernjosura,
todos el bueu juicio. Ni podia suceder tagiosos, y en América se le mira como tical que subrayamos en sus magníficos se ve levantarse del sepulcro, á Pláqido
otra cosa en verdad á un pueblo arroja- un gran modelo. Importa desvanecer tercetos. tal como fué, como un inculto ífua;*ro, de
do al azar como las piedras de Deuctilion cuanto antes esta ilusión porque no ha- Sob.-e un monte da nfeve iraspareute, imaginación más fecunda que otros, de
por los locos aventureros de Castilla, que llen sus innumerables defectos imitado- Eu el arco la diestra reclinada. más iastin.to de forma y de más delíeaílo
acababan de recojer la herencia intelec- res allende el Atlántico, donde todo lo gusto. 'Puede ;asegurarse que. toda su
tual de los zahoris de Córdoba y Gi'ana- aparatoáo y fiitil halla imitadores; im- Por ui) disco de fuego coronída,
M leslra GailleVmo Te'l la h';r(5ica frente. er,udioion se reducía a l^s obras de M-ar-
da; á un pueblo engendrado en uu Edén porta probar que solo como un joven que Yace ea la playa el déspota lasoleote tiuez de la Rosa, y á tal cual frase poé-
por su exuberante y riquisima potencia prometía puede ser Plácido tenido en Con férrea vfra al corazón clavada. ti'caeu.ellas apreudíia, com) el mármol
de los que salían embriagados de otro cuenta por los literatos graves. Luego, de Pitaros, Homeroren Ilion, y los últimos
Bden. Asi de la espuma del mar se for- para mayor desdicha suya, ha venido á Despidiendo al infierno acelerada destellos de la poesía mitológica que lah-
mó Venus, que es la espuma de los sen- presidir á la colección de sus poesías.la El alma negra eu forma de serpiente.
El cdlor l8 abaadoiia; sus saognentos za algunas veces el autjr de La CJÍÍJIÍ-
tidos y de las aspiraciones sensuales. misma, absolutamente la misma falta de Miembros lanza ia tierra ai Océano; racion de Venecia ¿Qué más? acasoi acaso
Pero entre los estravioá á que el esce- ' criterio que presíle á la juventud de los Td-naole á eciiar las oías y los vieutos; lo único quedelvaite granadino agra-
Sode imaginación conduce á los poetas, poetas de América. Como indicamos en NJ encjciura hummidid el inhumano, daba cuoQ-plidaíaeníe.al iie Míitanz.as sea
hay uno que es el que distingue á los el artículo primero, no puede dudarse Y hasta \os inseasibles elemeulos la magnífica elegía á Lamuerli ileUi du-
americanos, con ligeras escepciones hon- que esta publicación se ha h;oiio en Pa Lanzia de sí lo.i restos del tirano. quesa de Frias, pues á ella pertenece unj
rosísimas; uno tan díñcil de esplicar ris con ' uu propósito «xager idamente Es un cuairo completo. Hay en él de los dos eiJÍgrafes que pone en sus iu-
psicología, como fácil de comprender en revolucionario anti-español. yanhéa, eu pinceladas que recierd-m el colorido del fiiiítas composiciones, y ella le sirve de
prácticamente, pues no parece posible una palabra, sacrificando la repiitficioa renacimiento. El alma negra en forma de modelo en ia epístola, titulada En la muer-
que un don tan alto como la imagina- literaria y hasta la moral del oo ire poeta serpiente, parece inspirada por el juicio te de Felá donde despuaá de imitar ser-
ción, el quid divinum de tas inteligencias al deseo de'lastimar á España. No pode ^/ia/ju;Migiie.l Ángel bebió en el Dante. vilmente el ftimoso
poéticas, produzca tan bajo y tau coman mos suponer que esta culpa recaiga .so- iV lemas da estos dos sonetos compuso
detecto como la vulgaridad; y sin em- bre el editor francés, ni debernos supo- Placido alguno en que brillan dotes es- Pesde ¡as tristes.márgenes del Stina,
bargo, es lo cierto, es lo lógico, aunque nerlo por una razón poderosísima, por- celentes, como, el titulado La s^/mbra de diciendo
parezca lo más absurdo, que lo prueba que ese editor es una mujer dedicada al Mina detanl', dé Bilbao, de que hablamos Desde los bordes del sepulcro helado,
á cada paso la historia del arte. Cuando comercio de libros (1) que por añadidura en el artículo anterior. Los amatorios, rompe las trabas de la imitación, y cae
Se ve acometida del vértigo la loca de la no escribe, y además porqua los editores por regla general, nos parecen los mé ea sus acostumbradas aberraciones. El
Casa, todos los hombres se hacen seme- franceses, aun los vulgares y oscuros, nos malos, pues ya heaus dicho que su cementerio de Momo, que no es en verdad
jantes entre sí, todos se remedan unos á difícilmeate sacrifican & la satisfacción alma era tierna y sensible. El segundo eliiermano más díguo de Edipo, le ins-
otros, todos los hijos por lo entecos y de malas pasiones políticas las conve- de la colección empieza con estos melan- piró taipbíen uu Cementerio idMl detes-
abiffarradoá recuerdan & su padre. ¿Qué niencias literarias y su projpío iat/rés cólicos versos: table, doude es la imitación no menos
es Góugora sino el don Quijote de la m^rcautil. Ah jra bien: e.ste libro ha na- .Mir.i, lili bien, cuan mustia y deshojada servil, como indica su mismo título. Es-
poesía? ¿Qué es Churriguera smo el don cido muerto mientras que hecho de otro Etí co 1 (I ciijr aq'ieila rosa tos rasgos dan la medida del carácter
Quijote (IH k arquitcCtiirw? molo, dirigido par un escritor de con- Qje ayer brillinle, fresca y olorosa poético de Plácido. Le arrastra la elegía
No creeav/i que hasta ahora haya he- ciencia y de buen gusto, seguram^inte Puse en ta blancí mano p^fumida. por lo que su corazón tiene de tierno, y
cho ningún crítico ejsta observación alcanzara la voga que merece uu poeta lil rasgo final es tieraiíimo, y en el le embelesa el epigrama por ¡oque tiene
acerca de la literatura americana. Acú- delicado, sencillo é inocente en días lenguaje poético del autor revela estudio eu naturaleza de inculta Así hubiera
sanla á porfía da desarreglo, de exube- en que las musas visten desdeñados y progreso: estudiado el art.a poética, del cual solo
rancia, de un lirismo que tai vez supera girones de la filosofía y de las cien- Q 10 habiendo en todo el mundo tal mudanza, debió quedarle alg-una reminiscencia le
en muí gusto al de los cultistas, sin re- cías. ¿Salo en lu corazón habrá firmeza? La Vaquera de la Finojosa para su letrilla
unir ninguna de sus bellezas, y nadie se ¡i.,-^stima es que deslustren el segundo la Flor de la caña.
A no cegarle su olio á uiiestro país,
hañjado en su verdadera ocasien que hubiera empezado el colecto.- de Pláci lo cuarteto y primer terceto espresíoues No creemos que se uecesitaa más prue-
acHbamos de-apuntar. Reñejo fiel de su por' comprender que se las habia con un impropias y prosaicas, y hasta versos bas para demostrar su estado de infancia
vídHÍntima, y hoy de su estado social, principiante, falto de educación, da esti- Cojos, quiza por culpa del ilustradisi- por decirlo así. En los primeros añw no
sirve de-invencible remora á la imita- lo y de erudición poética, y hasta de sol- mo colectur! halla modo la imaginación de volar-sino
ción, que, bien encaminada en los pri- tura en el pensar y el versifi jar; hubiera Taml)íe:i merecen cítafse por lo tier- es sostenida por los espíritus fanáticos á
meros años de un poeta, acaba por ha- comprendido que de los versos de uu n )s y galanos los tercetos del que titula quien.se apresura á dar forma y papel
cerle original sin que lo comprenda él principiante solo deba salvarse de las ¿7 Canario.—En los dias de Selmora: en todos sus fantaseos. De aquí los á n -
mismo, y darle las dotes de sus modelos, llamas uuo por mil, y hubiera compren- donde C'ibre aquel seno con tus alas de oro geles y querubines, trasgos y giganto-
oc'iiio el amor (jlacií'- respira; nes, genios y silfidas que eu las obras
que más se asimilen á su propio carác- dido, flualmeuta, que no son los libros ab-e tu pico de coral ioaoro;
ter, pues la imitación es una traba que grandes los que hacen las grandes repu- Cuéiiiala el gozo que su edad me inspira; primerizas dicen lo quu el poeta no sabe
pronto, muy pronto rompen las imagi- taciones, sino los libros buenos. Todo es- y enire^a para siempre á la que adoro decir. Kn las de Plací lo abundan estre-
naciones febriles. Solamente el romanti- to, que es puro sentido común, ¡o ha des- mi corazón, mis versos y mi lira. madameiate. ¿Gomo no? Casi todo lo que
I cismo en su periodo álgido, por su iden- conocido el colector de Plácido. Su prin- Pero no pasará este artículo adelante, le pasa es sueño, casi todo es visión y de-
tidad de forma y de fondo con la poesía cipal mira fué sin duda imprimir un to- aunque lo motejen de tenacidad los lee lirio (ie la mente.
americana, pudo crear una especie de mazo en que no faltase ninguu género tores, síu que insertamos otro so-ioto que . Qiraiprueba de su candida ignorancia
escuela; pero esa misma no produjo na- de insulto á España, y ha acabado por prueba todo lo que h-nnos-dichi), abso- es ift mftña que se da para formar los
da que sea digno de citarse como mode- hacérselo á su propio país y á la litera- lutamente todo, así acerca del mal gusto adjetivos que le hacen falta, como un ni-
lo. .-Más adelántese verá probada esta tura americana. y detestables costumbres literarias da ño que no cómprenle las irregularida-
aserción prácticamente con los esfuerzos Mucho nos hierve en las venas ia san- América, como de la crasísima igaoran* des de los verbos, y dice ando por andu-
que hizo Plácido para imitar á Martínez gre española, pero es genero§'a esta san- cía del colector de Plácido, que no con- vo. Necesita mentar con una palabra las
de la Rosa y é, aigun otro de nuestros gre, y nosotros vamos á proceder de una tento con incluir treinta y ocho sonetos, deidades ó c,ualidades del Empíreo y les
poetas. manera enteramente contraria. Podría- que de semejante poeta, inculto y prin- endosa el adjetivo empíricas, oouvírtiéa-
E-ta vulgaridad, por otra parte, ha mos entregar á perdurable olvido al edi- cipiante, por fuerza habían de ser malos, dolas ipso facto ensaca-muelas ó hacen-
creado tan malas costumbres, por decir- tor y al poeta, seguros de que nunca pone en la cuenta el siguiente, improvi- distas que contratan empréstitos á mil
lo así, en el gremio literario trasatlánti- romperían su pesada losa, que-no-bastan sado por más señas, y con acróstico y por uno, teuíéadose por sabios. El mis-
co, que debe ser muy difícil A ios escri- cien •versos y tal cual rasgo escelente á flual forzado, que de seguro deshonra mo proceder aplicado á los tiempos feu-
tores resistir su contagio. Allí ha de can- salvar tm libro que tiene quince ó véjate más al hombre que ha .sido bastante ne- dales le da feuddlicos, y aplicado á los
tarse todo en la lengua de los dioses, mil dp^eatables; pero pecaríamos contra cio para no romperlo, que al casero im- muros heroicos como los de Bilbao, le da
aun lo que es de la humana indigno, que la justíoi» y la verdad; nos igualarianaotí provisador, que acaso por bondad, ó por numánticos. 0;ras veces sale del paso con
los periódicos políticos reservan por re- coa los caines americanos, fulminando más tristes y más poderosas razones, se casar á un adverbio y uu adjetivo, cooio
.gla general diariamente una tercera, ó en lengua española una sentencia de vio obligado á escribirlo. en la pobre España á quien llama anti-
cuando menos una cuarta parte de sus mueíte contra un poeta español que no Dice así esta rabadañada: gloriosa. Para que comprendan nuestros
columnas para inserción de la3 taorbiea la merece de todo en todo. AL S^ B. MARTIN ARREDONDO. lectores algunos versos que hemos in-
diarias felicitaciones de cumpleaños, de - Si alguna prueba necesitáramos del sertado en este artículo y el anterior,
días, de sucesos prósperos, de bodas, de empeño {Miesto en recoger hasta el más aparecesfeliz,
Sarcial, benéfico y bumaa
suljlime y geperos
añadiremos que emplea también algu-
natalicios; para las décimas improvisa- ligero autói/rafo de Plácido, la cantidad Wipido como el rayo estrépitos nos sustantivos del lenguaje vulgar
das, para las fúnebres elegías, para los Teréaderamente fabulosa de sonetos que HOleraote eo juzgar como Trajaa americano, defecto más disculpable en
sonetos con pies forzados, etc. etc. De en la colección se ínq^yen, y su calidad -^lustre, fuerte, ardiente, americsa un poeta casero, íiHprovísador y humil-
aquí que presida la vulgaridad á todas verdaderamente lamentable, nos demos- 'sSichíe á lamediacion del yaque uados de. El Oriente de Cristina, de Felá, de Sel-
las horas, á todas las inspiraciones de ios traría que ni los primeros balbuceos dce 5»-migo dulce,railitarglories mora, etc., vale para Plácido como decir
{ 'oetas, y de aquí, lo que es mucho peor, su musa faltan aqiii tan siquiera. Sabido ssasga^tes las eosefias del tiran el natalicio, y otros á este temor.
ft vulgaridad en la eleccioa de ios asuo^ es que la pesadilla de los sonetos aqueja oel eqa ealcna sin igáal SOZBL adormid á. veces el instinto-poético y el verda-
lauro inniar«esibie que has ganad dero talento se sobreponen á la ignoran-
tos, en las formas, en los g'iros poéticos, á loa principiante»á toda hora, lastimau- O'giilloso de haberle tnerecld
y hasta en los puntos <le vieta. Com- doquid^-su-atnor propio, que eaeolos 2;uii«a el dolor te aqueje y estasiad cia, y concibe en un mismo punto el me-
jor y más oportuno pensamiento y la
1 )rendemos que solo su grandísimo ta-
ento, unido á su criterio sin par, logre
Qijo(l) qtt«r>ab del cielo desceodid
(i) Madama C. Deoné Schinitz, cuya casa Orqe lu frente de arrayan sagrad
rub, pero no es hombre sa eclilor qse entienda
huir eu América de estos escollos. goaa eayidiable repaUcioa eá' el comercio de
Andrés Bello á menudo, Heredia mu- libros. (i) Singada Plácido qdso decir dtvtr ^ue»' de erratas, ni-ító*«i6f^'l9i«»í'«i& «íWregirlas.
 fi
mejor y más correcta forma. ¿Qué ele-
Chente no es cuasdo en su poesía á i a
leina Cristina, con ocasión del convenio
de Vergara, dice á Carlos V:
No ves, nidustruo, no ves coa que pujanza
de la tumba á romper tu atroz cadeo*,
sale la regia sombra de Pelajo
y vuelve á tf como i la palma el rajo?
¿T cuando dice á su amada en una
poesía bebida en el Arte poética de Mar-
tínez de la Rosa
Mi sangre es no torreóte
de lavas encendidas'/
¿Y cuando, para expresar las ilusiones
de su edad primera encuentra ésta feli-
císima frase?
el alma mía
empapada eo placer manaba amores?
Para concluir, citaremos algunas fra-
ses de las poesías que, según se cuenta,
compuso en el momento de su muerte.
El Adiós á mi lira termina con estas tier-
nas frases:
Dios y mi último adiós quedan contigo,
qne entre Dios y la tumba no se miente.
¡adiós! voy á morir... ¡Soy inocente! .
¡Lástima es que no diga: imuero (no-
ccntel
En la despedida á su madre desde la
capilla, exhala estos armoniosos acentos:
El ánimo afligido
recobre su quieiuü, moro en la gloria,
y mi plácida lira á tu memoria
lanza en la tumba su postrer sonido,
• . • . . . . . • . • • • . • . * • . . . • • . • . . . . •
ya el cuello inclino,
ya de la religión me cubre et manto...
¡adiós, mi madre, adiós!...
De la plegaria que iba recitando al
marchar al cadalso, y quees, sindisputa,
la más perfecta y sentida de sus poesías,
ya hemos copiado lo mejor en nuestro
primer artículo.
Los asuntos ligeros, como no sean
eróticos, apenas se prestan á la musa de
Plácido. Las fábulas todas, que son mu-
chas, aquí todo es mucho, han debido
eliminarse de la colección, inclusa El
cántaro de Juana, que aun siendo la más
perfecta en la forma, es en el fondo vul-
garísima, como su título revela; y pre-
tendiendo apartarse iie todos los que an-
teriormente han tratado este asunto, sin
duda para darle más novedad, cayó en
una licencia indecorosa y hasta soez. En
el mismo caso se hallan los epigramas
del Cementerio ideal, que ni merecen por
lo común semejante nombre, ni reúnen
condición alg una buena. Véase el único
chistoso, por lo desvergonzado, que en-
tre cincuenta ó sesenta tiene, para com-
prender cómo serán los demás:
Aquí yace Juan, querido
de la mas bella casada.
Fué muerto de una cornada.
—¿Y quién le mató?
—El marido.
Las letrillas, exhalaciones por lo ge-
neral de los sentimientos tiernos, encuen-
tran en el vate de Matanzas más apro-
vechado discípulo; pero son por fatal ca-
sualidad, las que méuos abundan.
¡Lástima que no haya cultivado con
predilección este géneio! La flor de la
taña tiene toques delicados y la movili-
dad del objeto que se propone describir.
La copiaremos también, porque juz-
guen nuestros lectore.H como se presta el
Tsuelo americano á la poesía pintoresca: dulzura, fluidez y calor; ese calor que es
Yo v( una veguera,
trigueña tOiíada,
que el sol envidioso
de bus lindas gracia»,
6 quizás bajando
de su esfera sacra,
premiado de ella
le quemó la cara.
Y es tierna y modesta
como cuando saca
sus i^.rimeros titos
la flor de la caña.
La ocasión primera
que la vide, estaba
ue blanco vestida
con cintas rosadas.
Llevaba una gorra
de brillante paja,
que tegié ella misma
con sus manos castas,
y una hermosa pluma
tendida canaria,
que el viento mecía
cooBO flor de caña.
SD acento divino,
sus labios de grana,
so cuerpo gradoso,
ligera su planta,
y las rubias hebras
que á la tnurced vaga»^
LA AMERICA.—AÑO XVII.—NUM, 8.'
del céfiro, brillan de la imaginación americana, ni mucho «oper, com serem poetas táo originaes e
de perlas ornadas, menos los delirios políticos de algunos «americanos, só conseguiram táo brillante
como con las gotas hijos espúreos de la patria, lograrán que vnome, depois de haveren esludado muito, e
qne destila el alba su poeta pase el Rubicon de la posteri- «muito, os livros antigos e modernos da lit-
candorosa ríe
la flor de la caña. dad. Plácido es solamente un trovador de «teratura ingleza.»
los bosques a r g e n e s de América; allí ¿No parece que hemos traducido de
nace y allí muere; un guajiro de más ta- este notable pát^afo nuestras lamenta-
El donungo antes lento que otros, como hemos indicado ya. ciones sobre la pérdida de la nacionali-
de Semana Santa, El hombre que en seis años (pues publi-
al salir de misa dad española en la literatura española
le entregué una carta, có sus primeras composiciones en 1838, (pérdida que nunca nos cansaremos de
y en ella unos versos y fué fusilado en 29 de Junio de 1844) no repetir que es la que la pierde á ella), y
donde la juraba, llegó á formarse un estilo poético suyo sobretodo elrecuerdode Alarcon, de Ven-
mientras existiera propio, ni á adquirir una instrucción tura de la Vega y de la Avellaneda, que
sin doblez amarla. mediana, ni tan siquiera aprendió el arte echamos en cara, por decirlo así, á los
Temblando tómela
de refrenar su fantasía, pese á su talento, poetas americanos? Otra vez damos in-
de pudor velada que nunca lo negaremos nosotros, tenia
como coa la niebla finitas gracias al Sr. Varnhagen, y s e a -
la flor <le la caña en su naturaleza poética alguna remora timos que en ocasión tan tardía haya lle-
invencible. ¿Cuál pudo ser esa remora? gado á nuestras manos su precioso FZo-
Sus pasiones políticas indudablemente. rilegio.
Hállela en el baile Los poetas americanos, para llegar al
la noche de Pascua; V. B.
púsose encendida
punto de perfección en que ponen todos
los hombres su mira, han de empezar
descogió su manta,
y sacd del seno por castellanizarse; y no diremos en este DESCRIPCIÓN SUMARIA
confuea y turbada punto más, sino probarlo con los ejem-
DE L \ REPÚBLICA DE MÉJICO.
una petaquilla plos prácticos de Ruiz de Alarcon en los
de colores varias. tiempos antiguos, y Ventura de la Vega Escita la atención de todos la cuestioa
Dídmela al descuido y la Avellaneda en los presentes.
y al examinarla internacional pendiente entre España y
he visto que es hecha Las desmedidas alabanzas que el co- Méjico, por lo cual vamos á dar en el
con flores de caña. lector de sus poesías tributa á Plácido presente artículo una descripción suma-
en el prólogo, son pura música celestial, ria de aquel Estado, teniendo á la vista
como decimos en Castilla, gritos y fan- noticias y documentos oficiales, que no
En ella hay-un rizo taseos de la loca de casa, como decia suelen ser muy comunes en Europa.
que no lo trocara Montaigne; que aunque desaparecieran
por todos los tronos Ei.territorio mejicano confina al Orien-
que en el mundo haya de la haz de la tierra cuatro quintas par-te con los Estados-Unidos y el golfo de
un tabaco puro tes de estos versos, aunque se perdiese Méjico; á Occidente con el Océano Pací-
de Mantcaragua, hasta la memoria de estás fábulas, de fico y el golfo de California; al Sur con
con una sortija estos e¡)ígramas, de estos himnos lasti- la Confederación de centro de América y
que ajusta la capa, mosos, siempre serian y parecerían los el citado mar Pacífico, y ítl Norte con los
y en lugar de tripa, restantes flores de un ingenio sin cultura,
le encontré una carta Estadus-Unidos.
como los estimaba su autor con más cri- No es la nación mejicana al presente
para mf mds bella
que la flor de caña. terio que sus críticos y admirándolos más tan pequeña como los Estados de Mote-
que sus mismos admiradores. zuma; pues según Clavijero, el antiguo
imperio de Anahuac comprendía solo las
No hay ficción en ella VicENTK BARRANTES.
sino estas palabras:
intendencias de Veracruz, de Oaxaca, de
POST SCRIPTÜM. la Puebla, de Méjico y de Valladolid, es
— «Yo te quiero tanto
como tú me amas.» decir, unas 20.000 leguas cuadradas; ni
En una reli<]uia Después de escrito este artículo el se- alcanza hoy la superficie de aquella vas-
de rásele blanca ñor D. P. A. de Varnhagen, represen- ta nacionalidad á la mitad de la exten-
al cuello conmigo . tante del Brasil en esta corte, ha tenido sión del primitivo vireinato de Nueva
la traigo colgada, la bondad de remitirnos un precioso li- España. Al declararse emperníior Itur-
y su tacto quema brito publicado en 1850 en Lisboa con el bide, tenia bajo su poder 216.012 leguas
como el sol que abrasa título Florilegio de poesía brasileira. El cuadradas (de 5.000 vara.-), y hoy sólo
en Julio y Agosto
la flor de la caña. prólogo y la introducción, obras de la cuenta la República 115 426 Í[2. Los Es-
docta y elegante pluma del Sr. Varhna- tados-Unidos le han arrebatado con tra-
gen, abundan de tal modo en nuestras tados vergonzosos y humillantes casi la
Ya no me es posibl» ideas acerca del carácter, tendencias y mitad del territorio. De nuestra medida
dormir sin besarla, defectos de la poesía americana, que nos la República Mejicana tiene 75.000 le-
y mientras que viva
no pienso dejarla. ha proporcionado un placer vivísimo ha- guas cuadradas; es, por consiguiente,
Veguera preciosa llarnos enteramente de acuerdo con per- cinco veces mayor que España; mayor
de la tez tostada sona tan es¡)ecial y competente en la también que Inglaterra, Francia, Aus-
ten pieaa I del triste materia como el Sr. Varnhagen. tria, Portugal y Bélgica reunidas; solo
que tamo te ama; Véase como lamenta este caballero el Rusia le escede entre los Estados eu-
mira que no puedo filibusterismo istelectual, que se preten- ropeos.
vivir de esperanzas, de introducir en la poesía americana:
sufriendo vaivenes El aspecto general de la tierra es va-
«Más que por este americanismo nao riadísimo: tiene llanuras fértiles ó pan-
como flar do caña.
»se entenda, como se tem querido pré- tanosas, grandes grupos de vegetación
»gar nos Estados-Unidos, urna revoluzao y estepas ó calaveras estériles, cadenas
Juro que en mí pecho «nos principi( s, urna completa insubor- de montañas escarpadas, cujías cimas
r.on toda fficacia «dinazao á todos os preccitos dos clási- cubiertas de nieves eternas están á veces
guardaré el secreto »cos grt'gos e romanos, e dos clasicos da coronadas por volcanes periódicos ó per-
de nuestras desalmas;
No diré á ninguno ^¡antigua mái patria.—Nao A América- manentes, hondos precipicios en medio
quees tu nombre Idalia, »nos seus diferentes Estados, deve ter de los valles, cataratas y rios más gran-
y si me preguntan »uma poesía, principalmente no destrip- des que ios de Europa, aunque no tantos
los que saber ansian «tivo so filha da contemplazao de urna y tan caudalosos como en el Norte. La
quién es mi veguera «naturaleza nova e virgen; más cuga cordillera magestuosa de los Andes, que
diré que te liamas »nar-se-ia o que julgasse, que para ser es como la espina dorsal del Muudo da
por dulce y hotesta «poeta original havia que retroceder ao Colon, corre cercana al mar del Sur por
la flor de la caña.
«abe da arle, em vez de adoptar; epossi- toda la América meridional, y se rebaja
No puede negarse á esta composición »se bem dos preceitos do bello, que dos tanto al dividir el istmo de Tehuautepec,
«antigos receben a Europa. Dennos que la comunicación entre ambos mares
la vida de la poeíia amatoria. Los ver- )>Deus a inspirazao poética para o lon- es practicable, y los españoles la inten-
«varnos, Y ara o magnifarmos pela reli- taron, por medio de vías ya marítimas,
sos que hemos subrityado están oscure-
cidos por algunos lunares, ripios, espre- »giá,o, para promover a civilisazao, e j ya terrestres, durante su dominación en
siones impropias y conceptos bajos; pero «exal'ar o ánimo a accóes generosas; e Nueva España. (1) Abrazando en un ma-
señalaremos asimismo como escelentes «serao amaldizoados, como diz b rosso
estos ocho: poeta religioso.
{{) Según el barón de Hnirboldt en sn ^ n -
Veguera preciosa » os vales em metro perigosos sayo político sobre el reino de Nueva España en
de la tez tostada,
«que abusaram da musa los años de 1802 y 1803, cuando los corsarios
ten piedad del triste
que tanto te ama; "infelix do que della se serve para injuriar ! ingleses entorpecían en todas partes el comer-
cio español, se hizo pasar una gran partida de
mira que no puedo suaraza, stus corrdigionarios, é por ven- cacao al través del continente, es decir, de Aca-
vivir de esperanzas, tura a memoria de f-eus proprios avósl» pulco á Veracruz. Un piloto vizcaíno llamado
sufricDdo vaivenes Hemos subrayado esos dos párrafos Goyeneche, proyectó un canal entre ambos ma-
como flor de caña.
para que nuestros lectores puedan apre- res por el puertecito de Cupica. En lo interior
ciar la identidad de pensamiento y hasta de la provincia de Choco, la quebrada de la
que tienen toda ¡a cadencia de la famo-
de forma que tienen nuestros artículos ¡ NoanamaRaspadura une las cercanas fuentes del rio de
sísimaescena de Lope de Vega en Lo y del riachuelo de Quito. Esietíltimo,
cierto por lo dudoso. con los del elocuente escritor y diplomá- juntándose con el Andajeda y el Zitara, forma
Vamos á concluir. tico brasileño; identidad que, repetimos, el de Azrato, que desemboca en el mar de las
nos place tanto como nos honra.
Hasta ahora se ha considerado á Plá- Anti/las, mientras que el Noanama vierte sus
Hé aquí, por último, el consejo que da aguas en el mar del Sur. Un religioso de suma
cido,- en nuestro entender, muy errada-
mente, como un ¡oeta en la alta acep- el Sr. Varnhagen#los poetas de su país: actividad, cura de la aldea de Novita, hizo que
ción de la palabra; como un sacerdote «Longe de nos o consignar a idea de sus parroquianos abriesen un canal pequeño en
«que no Brazil nao se debe e muito estu- la
jque lleva las ideas de Dios á los oidos de
quebrada de la Raspadura; este canal es na-
vegable cuando abundan las aguas, y entonces
los hombres; como un instrumento deque«dar o clásicos portuguezes e a gramá- se pasa el cacao en canoas de un mar á otro.
seJayuda la suprema sabiduría para di-tica,—Palo contrario refiutamos essa ne- De manera, que gracias á un modesto fraile es-
«cessidade urgentlssima, ao vermes que pañol, en Í788 existia común cacioo entre am-
latarse y estenderse por los espacios;
vos nossos melhores scriptores,—os que maisbos mares. ¡Qué dirán á esto los ingleses y los
como el buril que graba con caracteres
«agradann no Brazil, foram osijmmaisos norte-americanos que tapióse han vauagloriado
de fuego el paso de IHS civilizaciones en por la originalidad y la grandeza de sus proyec-
vfolhearam
las pirámides que levantan ellas_niismás. e lembramos que Byton, tos para unir el Pacífico y el Atlántico! Los pro-
Ño en verdad. Todas las exageraciones «comseu grande genio, e Irving e Co-
 CRÓNICA HISPANO-AMERICANA.

jpa de una ojeada general toda la su- ticio. Los del Norte tienen buena talla, i das, pues g ú s t á ' ü é hacerlas sonar mu P otosí. Zacatecas y Jalisco, á cuyo nom-
perficie de Méjico, puede observarse que fuerte musculatura, nairada altiva, color I cho'cuaudo adda",' cálzVñ y ¿¿aqueta de bre hay que agregar hoy otras qua se
está gran parte bajo la zona tórrida; rojo oscuro, pelo negro y lacio; ea el estezado, faja y sombrero tendido de an- han descubierto posteriormanta. Eli pro-
jpero el clima físico de un país no depen- centro de la Repiblica son más bajos g e - chas alas. Bduca á su caballo como el ducto anual de todas las qua de ellas se
de solo de su distancia, sino de su eleva- neralmente que los blancos anchos de árabe, le quiere con delirio, le apareja explotan actiialmeate, se estima en unos
ción sobre el nivel del mar; de su proxi- hombros y con las estremidades muy con silla vaquera con grandes estríbjs 2.000 á 2.500 quintales, cantidad muy
midad al Océano, déla configuración del pequeñas, despiertos é inteligentes pero y le adorna con flequería y pasamanería inferior á la que se necesita para el be-
terreno, y de un gran número de otras do intenciones malévolas, sobre todo los de cuero ó de" seda: • Montado ncitica se neficio de las minas da oro y plata en la
circunstancias locales; por estas causas desmoralizados por la guerra. Hacia el desprende de su machete, que lleva de- República, cuyo consumo suba hoy á más
más de las tres cuartas partes del terri- Sur la raza degenera hasta padecer de bajo del muslo, y con eV cual se bate de 14.000 (quintales al año. La más rica
torio comprendido bajo la zona tórrida enfermedades horribles como los pintos. hasta por pasatiempo. Ejecuta movi- de estas mmas de azogue, es la de Gíua-
en la nación de que nos ocupamos, g o - Los indios desconfian mucho de los blan- mientos dificultisimos y evoluciones ex- dalcazar en San Luis Potosí, que produ-
zan de un clima más templado que ar- cos, y solo ejerce sobre ellos influencia traordinarias, logrando de esta manera ce sobre 1.000 quintales anualmente.
diente, y á veces frió en estremo; pues el clero regular y secular; hablan poco que su caballo sea incansable. Maneja la No son pocas tampoco las minas de
todo lo interior de' la tierra forma una y mal el castellano. Indolentes, codicio- lanza hábilmente con muy pocas leccio- cobre, y han sido explotadas con buen
inmensa llanura que se eleva 2.500 me- sos en sumo grado y no muy trabajado- nes, y suele no ser mal tirador con la éxito, las de Santa Clara, las de Mazapil
tros sobre el nivel del mar, y esta es la res, se distinguen, sin embargo, por su carabina.-Los negros, los zambos y los y las de Zacatecas; producen las penúl-
razón de tan estraña anomalía. Apenas sobriedad en la comida, pues solo se ali- rancheros, son, por regla general, los que timas de 4 á 6 000 quintales al año. Se-
se halla un punto en el globo cuyos mentan con tortillas hechas de maíz y hacen todas las revoluciones, pues se gún el Sr. Lerdo, la minería dá en Mé-
montes presenten una construcción tan mojadas en una salsa de pimiento. Sue- jactan de gran fidelidad para con sus je- jico veinte y nueve millones anuales da
extraordinaria como los de Méjico; tal len añadir unos puches llamados atole, y fes. pesos fuertes. También se encuentran en
vez en África y en Asia bajo los 34 y 37.* en los días estraordinarios un tasajo de . El gobierno de Méjico es una federa- el antiguo vireinato de Nueva España,
de latitud boreal se hallen llanuras aná- cabrito y alguna que otra golosina obra ción republicana; después de esta última piedras preciosas en las laderas de los
logas; pero aun no está suficientemente de la mujer, que por lo regular es lista, revolución, el poder central está casi re- Andes, y perlas y corales en los golfos
demostrado. La cordillera que forma la trabajadora y hacendosa, aunque esté ducido á la nulidad. de la costa.
vasta meseta de Méjico, tiene más de criando en cuyo caso lleva á todas par • El terreno de Méjico dá abundante- Hé aquí la lista de los Estados ó pro-
500 leguas, y su declive uniforme hacia tes á la espalda, envuelto en una tela mente los más preciosos fratos dal reino vincias con su población respectiva, sus
las costas es tan suave, que apenas se burda, al indio pequeñito. Su vestido se vegetal, trigo, maíz, maguey, que su- capitales y su territorio.
nota descenso alguno. conipone de sandalias, calzones cortos de ple á la viña, yaiailla, cochinilla, azúcar Superficie ea
La temperatura mediade estas llanu- cuero y una blusa de lana ó de algodón cuyo cultivo introliijiilarnán Cjrtés, ESTADOS. PoMaciou. leguas
ras se asemeja á la de Ñapóles, y sin ajustada á la cintura: los braz>s y las cacao, algodón, añil, piaaienta, tabaco, cuadradas.
embargo, lo qua los indígenas llaman piernas al aire y en la cabeza un gran palo decanipecha, caoba, jalapa, palma,
tierras calientes, producen los frutos déla sombrero de paja; la iadia lleva zagale- pino, cedro y tuios los árboles gomo-re- Chihuahua....... 147.600 13.494
zona tórrida, y para los no naturaliza- jo burdo camisa de algodón, y sombrero signosos tan útiles para la constracciou. Chispas.... . ' . . . . •. 1-44.070 2.598
también, ü a perro y un burro completan Es tal la cria de ganado vacuno, lanar, Coahuila . -73-. 3.4a 7.868
dos, enfermedades peligrosas y el vómi- 162.218 6.744
to negro. En la falda de los Andes á 1.200 la familia del pobre indio, dedicado ge- caballar, mular y da cerda, que hay ma- Oiirafigo . . 713 ..5fa . - 1.753
ó 1 500 metros se disfruta de una pri - neralmente á las faenas del campo, ó de nadas de todas estas espacies qua vagan Guaoajuato....... 210.000 4.431
mavera perpetua. esta es la región de trajinero al por manor. Nos olvidamos sin dueños por-los campos, y se danomi- 774.461 6.758
las tierras templadas, y en ellas se hallan de que á pesar de su frugalidad se em- nau mestems. Las gran les moles de cor- Guerrero 973.697 2.717
Jalapa, Tasco y Chilpansingo, célebres briaga con el pulque y el mezcal qua se dilleras están veteadas por todos los mi- Jalisco 491.679 3.198
por lo muy saludable de su clima; mas saca del Mííjiüe?/'. aunque no ie disgustan nerales que más -apeteca el hombre; hay Méjico 133.361 2.321
como esta altura sobre el nivel del mar el aguardiente y los licores .europeos. filones de plata' en' U Veta-mádre da Gua- Michaacan 525.101 4.426
580.000 1.814
es la de las nubes, abundan las nieblas El criollo "es indolente y . iauy dado á naxato que tienea 10 varas, y á veces Naevo-Leon 184.161 340
espesas y las lluvias. Las tierras frías los goces materiales,, disipa la fortuna de hasta 60 da espesor! Ságun los geólo- Oajaca... 368.120 4.101
están á 2.200 metros, y su clima se ase- sus padres con grande- facilidad; le gus- gos, al agrietarse la costra del globo, Puebla 139.374 17.172
meja al de Roma; cuando llegan á 2.500 ta ser empleado, y más si su puesto le quedó soldada casi á lo largo da los An- Queretaro 160.000 4.690
como las llanuras de Toluca, los olivos da consideración, uniforme y tratamien- des por un derrama de materias argen- 63.580 2.171
no dan fruto, el clima se torna áspero y to, aunque el sueldo no sea muy crecido. tíferas. De uaa memoia presentada á Sao Luis Potosí... 100.064 4.219
frió como el de Francia y el de Lombar- Le falta carácter y le sobra amagiua - las Cámaras por él miaisfro de Hacienda Sonora 264.725 3.838
día. aunque la vegetación crece y vive cion. en Febrero de 1850, aparece que desde Sinaloa 6SÓ.948 7.364
jnéaos vigorosa. 1.° de Enero de 184S hasta el 30 de J u - Tabasco 356.024 4.243
Las costos componen la plebe del Esta- 200,000 12 7 ,
La población general de esta vastísi- do, y son lo- más apropósito para la nio de 1849 la total acuñación de oro y Tanaaulipas
ma superficie tan variada en su topo- guerra y los trabajos duros; el insigne plata en las casas de moneda de la repú- Veracruz 80.171 276
grafía era de 7.661.919 habitantes, se- historiador, D. Lucas Alamán dice que blica, sin incluir la de Hermosillo, fué lacaiaa 61.243 420
gún el cualro sinóptico del Sr. Lerdo, los españoles eian la cabeza, y las castas como sigue: Zacatecas
publicado en 185L Según la matrícula los brazos de la producción del vireinato 12.000 8.437
de los cónsules los extranjeros en 1850 de Nueva España. En ellas hay dos ti- Distrito Peder*!...
estaban en la República mejicana en la Territorio de Tlax- 7.661.919 115.426 V»
pos que conviene retratar y son el lépero cala
proporción siguiente: y el ranchero:
Españoles
Franceses
3.047
803
El lépero es una especie de lanaxaroni,
trabaja lo suficiente para satisfacer sus
escasas necesidades, pues anda medio
ilpilll ídem de Colima...
ídem de la Baja
CAPITALES
CaljforDia
de los Estados y territorios.
Númsro de habi-
tantes de cada
noade ellas.
logleses 504
Alemanes.
Norle-americaaos
416
397
desnudo y duerme sobre una estera en
los soportales; canta con gracia acompa-
ñándose de una bandurria, é improvisa
i liiiii:: Chihuahua 14.000
Italianos 129 • : • • . : • S: : Sin Cristóbal de las Gasas.. 6.500
sus coplas, con las cuales moteja á los 19.898
Suizos 45 transeúntes, ó se.burla del gobierno y de Saltillo 22.000
Hispano-americanos 33 la policía. Para sus vicies hurta con tal Durango 48.954
Belgas 16 maña y sutileza, que la palabra leperada Guanajuato ••- • 4.300
HolánJejes, polacos, suecos, 22 se apropia á-toda acción baja llena de sal Tixlla (Ciudad de Guerrero). 63.000
rusos y portugueses y travesura. 12.000
5.412 Guadalajara 25.000
Rara vez apela ala fuerza para defen- Toloeca.. 13.5Í4
No puede, sin embargo, decirse que der sus rapiñas, y cuando cogido iiifra- - 4 Ot • Morelia... 25.000
este sea el número total de estranjeros ganti le dá de palos el ofendido, sufre
residentes, pues aunque las leyes que con resignación esta quiebra de su ofi-
u o • •N900
o- J or
-1
I Mooterey
Oajaca :.
71.631
29.702
40,000
obligan á renovar anualmente las cartas cio, diciendo solo mientras procura ea-
de seguridad son bastante severas, es caparae;—«ya está, señor amo, ya está.» Puebla 7.000
indudable que una gran parie de ellos -^Es primoroso para toda obra de manos Qu«rétaro 12.000
no cunaplea con este ¡requisito; cal-' y tiene un prodigioso talento de imita- :^aa Luis 4.000
culando, pues, el número de estos en doaqtíe pone 4 prueba haciendo figu- O *w J»- O * . ' 05 O ' W W UriBí 5.300
2.000 ó 2.300 resultan que no pasan rasíde cera ó de trapo, y retratando con Culíacan 8.228
. de 7.700 los estranjeros que viven hoy nobieeiaotitud. Los más encopetados, son Sao Jc>an Bautista......... 40.000
en la Rei)ública, los cuales, comparados insigues calígrafos, y con una cestita y
con su población, están en propjrcion de recado de escribir redactan graciosísi-
3illalili Ciu lad Victoria 25.003
Vjeracruí 170.000
uno por cada mil habitantes (1). mos memoriales á los preteádíóntes y
Aceptando una clasificación más ge- donosas cartas de amor con sus eade- »^ **• - ^ hfl hs — N*. Sérida 3.463
neral 1.200.000 habitantes son de la ra- ciia§ correspondientes: A estos memoria- h¡)cre-»-04^creococ*3 Zacatecas..:.. 31.774
^ No hay
za española; 3.680.000 indígenas ó in- les; uEtramarinos se les dá en Méjico el os ío co^ fv» c» w_ UE o í>¡> Méjico. . . . i para
. . . . . . qué
. . . recordar la historia
500
dios, y el resto pertenece 4 varias cas- epigramático nombre de> evangelistas. dela.razaindígepa, ni la epopayade la
•^ (jr to- c:»' :&• 00 00 tí^ O
QOOaOOOQoocjeí^oo
Tiaxcala.... .v;.-...;
conquista, ni los esfu^^rzoa hachos por
tas, productos de las mezclas de blancos Por!Altima,!el lépero, como ©i julio, se Colima
negros y rojos, los cuales toman los embriaga con frecuencia y habita la los españoles para.'. introducir la civiliza-
- nombres de chinos, zambos y otros no cárcel, gracias á sus malas mañas, a l o Cianoccidental en aquel inmenso conti-
.-. menos pintorescQS. i Híénos una vez j)or semana; allí suele nente; vengamos á la creación de la na-
El idioma general es el castellano; consolarle una amiga que le asiste y le _ Agregando ahora á esa suma nueva ó cionalidad, que nació,- no del horrible le-
pero se habla entre los indios veiut* tratí atot.e é tortillitas. diez millones de pesos, por los seis ó seis vantamiento-del-cura-ffiM^o y df! More-
- idiumas conocidos y diferentes, de hk y medio millones, que según datos cier- los, sino de la traición del «íjárcito ea
'El'íanchero es'hombre de riiás altos
'Cuales quince están sujetos á reglas gra- peíísamientos, muy semejante á nues- tos, dejan de acuñarse anualmente, y que 1821. Al gobiwno-provisional "Se siguió
maticaltít*, y son el mejicano ó azteca, el trdimájos de rumba, y á lá gente ma- en virtud de permisos ó fraudulentamen- él imperio da Itarbid^, que fué inrnedia-
otomi, tarasca, zapoteca, misteca, maya, leante ,de nuestro»! camino.?; forzudo, te, se exportan por las costas del Pací- tdménte d'estroiíado, proclamándose la
ó de Yucatán, totonaca, y popoluca, diéstrísimo jginete, bebedor de paladar y fico y las del seno mejicano, resulta que R'ípública. Desde.entync.e^. tuio ha sido
matlaziugua, huasteca, nija, caquique- de CHt>éza, gasta sin duelo y juega con el total producto dalo que se benefició de uiía cí^dep^iclé. revoluciones en que los
lla, taralaiuura, tepehnana y cora. las minas en plata y oco durante el cita- federalistas y los monarquistas ó unitarios
garbo cuanto tiene y halla á mam, vive do período de diez y ocho meses, escede han estado en lucha para disputarse el
Los indio.s ofrecen variedad seguu los en-el campo eti su rancUería, cultiva con de 38.000.000 de pesos fuertes.
- climas donde habitan, las ^(cupaciones 9M mujer é hijos la tierra, ó se hace ma- poder. Hoydominan-los primeros, y han
Por ios informes dados por la comi- proclamado- la- - desamurtizacion de los
á que se entregan y su rógiiaeu alimen- ñoso, como allí llaman á los bandoleros ó sión que nombró la junta de Fomento de
bienes delclero, que según algunos es-
yecios de üaray y el camino decretado por las criado de algún propietario rico. Sutra- minería en 1844 aparece que .existían en- critores, eqalvaléü 'á'Já .initad da todos
Cd.'ies en 1821 suu Je todos conocido, y Miguel ge es parecido al de nuestros picadores tonces ya reconocidos 2o üriadm-os y mi'- 'ló^jibienes raices fie la. nación, y cuyas
, Chevalier los cita. de principios de este siglo, botas de cue- nás de azogue ea los, Esta los de Qaaró- ratitas pasan de' óphp [i !diez millones da
(1) Véase la Guia de Méjico del Sr Delmonlc. ro, espuelas vaqueras con grandes rue- taro, Guerrero, Guanajuato, San Luis peso.s anuáíes:'nó han podido arrancar
 .8 LA,. AMíjl^l^f ^ A J v p . í . Y I I . — N U M . 8.

del C o n g r e s o Constituyente la, libertaji Papel sellado 150.000 de murallas, Ja cercan acequias que vie- njas exatitud el estado de su cultura, y a
ttexínltt» y están fotjaúdo'nna Gonstitu- Mbítie-pld....... 30.600 : nen de 'la L a g u n a y qué en otro tiempo sé eleven al apogeo de su gloria, y a se
fcíon muclio m á s escéntríca q ü é í á ' d e los Derechos sfobre enfaayo de plantas - se raniificaban en caqales dentro de la precipiten en vergonzosa decadencia. Y
Estados-Unidos. ' . enel distriio y lerritwios, im- misma población. Contando con el. ipo- entré todos los géneros de poesía que
El ejército se compobe de dié¿ b a t a - l pusBto sobre bereocias trasveri' yímiento de'forasterols, habitan ordiña- nacen espontáneamente del desarrolla de
llones de escasa fuerza y (Je dps coínpa- 8al)3«,.peage8. canas desegurir, ríameüte la capital de la República la civilización, n i n g u n o h a y tampoco
dad ,. paleóles de oavegacioq. .
filás activas de infantería. Üé caballería pasaportes y otros ramos,meno- 20Ó.O0O persona^..Por su temperamento que merezca áer tenido por mas claro e s -
Ii¿y seis cuerpos ó escuadrones: los in- res ..V 229.000 de continua prirnavera, por sus m a g n í - pejo de los sentimientos y de las c o s t u m -
g e n i e r o s , los zapadores y la artillería ficos edificios, obra en su m a y o r parte bres que la sátira,
tienen escasa dotacloü. Conipo^en |a, r e - Total 8.500.000 de los españoles, por l a s . huertas, j a r d i - Equivocados andan por cierto los que
s e r v a a l g u n a s tiitisiones lig-erás y los nes y haciendas de sus alrededores, por la califican de pasatiempo y recreación
cuadros p a r a forinar milicias T)rovincja- Se vé, pues, claramente, comparando sus recuerdos y por su g r a n población, de ingenios travie.-^oí? ó mal intenciona-
lés en la m a y o r p a r t e de los Égtados. El la s u m ^ de los gastos con la de las r e n - Méjico es la Roma del Nuevo Mundo y dos, sin curarse de comparar los cuadros
ejército se recluta por levas y ios oficia- tas, que^aunque no h a y a deducción al- no ha sido profanada por planta e s t r a o - que nos traza el poeta Con los que el h i s -
les siíelen h'aber obtetlido'sus g r a d o s en g u n a en'estas últimas, él déficit anual jera desde qué la construyeron los espa- toriador nos ofrece. La sátira solo p u e d e \
recompensa de merecimientos políticos y del Tesoro público es de cerca de cinco ñoles, h a s t a la invasión de las desorde- ser coi)fidtíra4a por la crítica como la j
a u n literarios. La marina de g u e r r a t e - millones de pesos. nadas tropas de Scot. El estado 6 p r o - protesta" de lá. virtud coutra el vicio; c o - I
n i a nueve buques pequepos y pntre ellos BEÜDA NACIONAL. vincia de Méjico comprendé ocho distri- mo la condenación lanzada por el senti-
'ájannos vapores cok ír'eírita y cinco ca- i » deuda general que hoy tiene Mé.- tos, 32 partidos y 160 m.qnícipalidade8. miento de la justicia, por el generoso
•tíoiies y unos trescientos hombres de tri- iico asciende á 133.524,242 pesos .fuer- Éntrelos primeros está e l d e Cuerñavaca, anhelo del bien contra la negación ó el
pulación,; pero recientemente h a n pere- tes, c u y a suma está dividida en deuda qué cuenta 411 habitantes por l e g u a c u a - olvido de ¡los principios fundamentales de
tido cuatí-o de ellos én u n a b o r r a s c a . Su esterior éjnterior, del modo sigaieute.- drada. la moral, y a recaiga esn fallu s ó b r e l a
m a r i n a mercante es proporcionada á esta El punto'por donde desembarcó Her- opresión ejercida por la fuerza, y a r e -
miserable marina de g u e r r a . S e g ú n u n a Exterior. Ps. fs. i n a n Cortés, fué Verácruz, hoy u n a de prenda la venalidad y codicia de los
noticia de la junta directiva del Crédito Según decreto de 14 de Junio lias ciudades m á s importadles oe la Re- magistrados, ora persiga la licencia de
público entraion en 1851, por todos los de 1850 queda reducida la ipública y Capital del Estado O provincia las matronas, Ora, en fin, sii^va de azote
puertos de !a República, 839 buques que I deuda A..\ 51.208,258 de su nombre: situada en medio de lus á todos los vicios que p l a g a n la s a -
median 256.762" toneladas, y de estos Réditos (no pagádos)al 3 por 100 arenales'dé las playas diortíferas del se ciedad, llegada esta á su mayor refiaá-
sólo 68 tenían bandera m j i c a n a , c u a n - segnú el desreto de 14 de Oc- no mejicano la rodea.'i en forma semicir- mit'Uto.
do españoles entraron ó salieron 6L El tubre citado 1.536.446 cular murallas bajas y poco sólidas. El Tal enseñanza debemos á la historia
valor de ¡as iití^iortáciones de l á R e p ú - castillo de San J u a n dé ÜU'ua defiende del arte: el oriente reviste las protes-
biica_asceiidjó en el mismo año á las can- 52 744.704 el puerto y pasaba en tiempo de los es- tas que [)arteu del seno de la esclavitud,
Tidades siguientes:^ pañoles por u n a pla;ia fuerte de primer coa la forma d e l a p ó l o g o ; Grecia, ufa-
Imponaeion.. ¿ 2Q.157..í)nO ps. fs. Iníerior. orden; además de dominar la población n a de su libertad, vela por .ÍU conserva-
Exportaciou : 2tí..WD,D0O A los cosecheros del tabaco, ca- ofrece* esta fortaleza la ventaja de ser ción, ejerciendo la censura de las c o s -
pital y rélíttos hasta 1849 1.019.971 más saludable que el resto del litoral. El tumbres republicanas por medio de la
Toaai .4a..lfí.7..00O Por ocupaciones forzosas id. id. 1.500.000 itinerario de Vefacruz á Méjico es como comedia; Roma, a b r u m a d a bajo el peso
Certificados del cobre, id. i d . . . 2.732.318 sigue; de espautosa depravación, a r m a á la s á -
De esta exportación catorce-á- quince Id»mdel20 por 100, id. id 12.874.335
De Mí'jico á Ayotla , 7 O tira de la vigorosa entonación y apasio-
liem del 6 por 100, id. id 3.472.000
millones fueron en inetaiespreciosos. Deuda flotante, id. id 2.4Ü0.000 A Riü-Frio 7 14 nado movimiento de la oda; y mientras
LüS presupuestos se dividen' en cen- Jlioerín, id. id 4.804.368 A San Martin ' 7 21 pone .con'ella de relieve su mísera d e s -
tral y p a r c i a l e s de los "Esíádo-s." S e g ú n Peageá, id. id 5.000.C00 A Puebla. 7 28 uude¿, reclama para sí, pt^r boca de
las M'ímorias de. los mijaistrós ^ y otros' A Ws empleados civilps y mili- 32 Quintiliano, la gloria de haberse dado
•A Almoroque.. 4 ^36
documentos auténticos^, jas. .atenciones 10 000 000 A Acajeie ' 4 42 vida. Renace más tarde en la lira de los
del gobierno g e n e r a l son Gomo s i g u e n : Escrituras aoiepioreu ala inde- A, Nopaluca......, ..¡ 6 45 trovadores para reflejar de lleno el m u n -
Ps. fe. ', 30.000 000 do artificial en que se a g o s t a aquella
A Ojo:de Agua.. 3 52
Convenciones diplomáticas. A Tepeya huaico , . . . 7 59 musa, fastuosa y rica en lo esterior, p o -
PresnpBf'slo del mí- ••• • A subditos ingleses, capital y ré- bre y descolorida en el fondo; trasfórma-
A Pero le ,7 64
risierio de Guerra y ... 178.000 A Las Vigas 5 71 se después en manos del Dante, levan-
Marina •.. 6.280.449 A Montgomery y Nicod, id. id.. 633.(100 A Jalapa, 7 75
83
tando su vuelo á las sublimes regiones
Id. del de Rejacio- A tas mision.'isde Filipinas, id. id. l.UOO^.OOO de la epopeya, ó y a pintando, en las del
874-. 004- Al Encero 4 88.
nes .-. .'. arcipesUe de Hita, tudas las flaquezas de
426-. 220 75.615.992 Al Puente N.icional 8 93
. Idr del de Justicia... .68».i 54 la humanidad, adopta al par todas las
Id. del de Hacienda. 1 A! Manantial ; 5
formas artísticas, para lograr toas fácil-
Rédito anual de la Resimen. A'Verácruz , S
mente el fin apetecido; y al brillar el sol
Deuda exterior. El primer número señaía la distancia
Deuda esierior so- • b2.Tt4.704 del renacimiento, reaparece con sus a n -
b'e 51.208.230 pe- Deuda interior. 73 615.994 de lug«ar á liig'ar; y «ii seg-utndo la ([ue
h a y desde Méjico. El:viaje s e hace en t i g u a s preseas líricas en Vincí—Guerra
sos al 5 por 100.-.. 2.b60-.4í2- y Alamani en Dolce y Ariosto.—Argen-
"itt. sobre la \)Srvsás ;" Total 128.360.690 tres dias y medio en diligencia. H a y t e -
légrafo eléctrico en esta sola línea. sola, Góngora y Quévedo empuñan por
f la Dfuda interior • último el azüta de Persio y J u v e n a l , y
"•' (pre'pna ÍUITTST, y Aquí vamos á dar fin á nuestra incom-
A u n q u é ^ a noticia que antecede r e s - pleta y sumaria díscripcion que tiene en medio-de-ladecajlenGia, que aniquila
que liene fondos pecto de la deuda interior, es tomada dé
. «signados para sa ú n i c a m e n t e por objeto, no escribir u n el imperio-de Ios-Felipes, levantan su voz
los últimoíi datos oficiales, como la m a - p a r a p r o t e s t a r c o n t r a a q u e l l a misma de-
pago, siiíincluir los i.300.000 . . 5.S49.366 yor parte de. ella; nio está liquidada, p o - artículo geográfico, sino satisfacer la
C[ editas de mioerla, curiosidad pública de E s p a ñ a sobre el cadencia "con''mayor' h o l g u r a y m á s
13.126.239 drá h a b e r ; eü las: s u m a s ^algunas dife- estado condiciones y poderío dalaRepú-^ enérgica 'rés'druciü'n de lo que parecía
rencias, qtiej sin. embargo- no serán de consentir'e'l'ésfádó'dé'ra •República. E n
blica mejicana.
No se incluyen a q u í Jos-intereees d e la m u c h a coBsíderácioñ.; . • todos las .siglp.sj.en todos los pueblos y
deuda anterior-á- la iodependencia, que Los pre^upijestósipartiQulares de los LA DESVERGüEf^ZA. bajo todas ia^-íocmas del .arte desempeña
en su m a y o r paxte- g o z a el- rédito de 5 ó Estados san :como s i g u e n : : POBMA JOCO-SÉaiO POR D. MANDBL BRETÓN DE la sátira idéntico ministerio, revelando
6 por 100 anual, y aunque no son de pa- ; . : : : ; : ; Ps. fs. sietopre las-dolencias que aquejan á la
Z.08 HERREROS. humanidad y las revoluciones de su e s -
g o u r g e n t e , autaentftb' él iiüonto total de
la Deuda pública' en oOO'"6'700 pesos Chihuahua 162.476 Ma drid. — 1856. píritu.
anuHlmente. [[','.[ Ctjiapas 5ÍÍ..335 A" esta indeclinable ley debía, pues,
Habiendo si(Jo ¿eéptada por. Ins acree- COahuiU..... 48.^93 Cuando en medio de las difíciles y lar- someterse el autor de la Desvergüenza, si
dores de la Deuda .e&terior Ja ley expedi- Darango........ .•.. 2n.429 g a s vigilias que consagramos al estudio aspiraba á merecer verdadero lauro. L a
d a p a r a el a r r e g l o d a s u s créditos, d e b e - Guanaluato 59d.$47 de la literatura patria de otras edades, España del siglo xix, a g i t a d a por el
rán reducirse lo«-rédito& de- esta parte de Gcerrero (cálculo). 80.000 nos volvemos á la presente y vemos ca- misiffo torbellino que revuelve la Europa
la deuda nacional á los Vvde la s u m a Jalisco 456.477 da dia salir á luz producciones,donde se entera; dominada de g r a n d e s errores;
que aquí representan; Méjico 499.414 reflejan las a n t i g u a s dotes de nuestros presa de encontrados inteieses, bien que
Aljchoacan '329.068 jam g r a n a d o s ingenios, llénase nuestro p a g a d a en demasía de su cultura, ofre-
...BENriS.. • pecho de complacencia, sintiéndonos in-
Npevo-Lcon..,.,. 'Í4.400 cíales en su constitución política, c o n -
Procediendo" casi' todas ' é s t a s de i m - OÉjaca........... 352.547 clinados á esperar el instante en que tor- tradicha de continuo y ocasionada á
puestos indirectos,''ño; ^es .posible ^ a r Puebla........... 133. T12 ne á ser el habla castellana intérprete g r a n d e s trastornos, en la mortal indife-
606.803
857. 398
con exactitud ja Q^ñÜdad .¿que ascien- fiperélnro.. legítimo de g r a n d e s y trascendentales riencia religiosa que seca y mata todo
den anualmente.por. .estar sujetas á a l - 142. é06 ensamientos. Avezados á rendir el t r i - elevado sentimiento y en la sórdida codi-
g u n a s alteraciones. S i n e m b a r g o , s e g ú n
las noticias de lo q u e ellas han produci-
San,LttisPoiOs,f...
Sonora"
132. 500
77. 859
E uto d^ nuestro respeto á todo to d i g n o
y meritorio, lejos de tener en poco los
cia que h a señoi-eado todos los corazones,
repitiendo sin cesar en tados los oidos;
Sinaloa 47. 072
do en los últimos años, puede m u y bien Tabasco. nobles esfuerzos de aquellos q u e ponen
192. é03 Sor famoso es grande cosa;
calcularse que subirón á lo m á s , pesos s u ciencia ó au talento al riesgo de a p a -
Tamaulip?s........ í6e. §37 el medio cualquiera sea,—
fuertes, á 8.600.000; h é aquí a l g u n o s VerBCfoi,........ 484 sionadas censuras ó mal disimuladas en-
348.
pormenores: Yuo(il4p\.... . \ . , vidias, interrumpimos con verdadadero no solamente la idea generadora de su
Ps. fs. Total en ps. fs... 5.156.859
ZiicRteea^........ gozo nuestros habituales t r a b a o s para Hbro sino también de la materia poética.
ftlicitar con i n g e n u o aplauso 4 los que A que iba á dar forma.Pero si el pensa-
Derechos de importacioo 4.000.000 En estos presupuestos está ipcluso el recaban p a r a sí gloria bien cimentada y miento capital de l a Desvergüenza ha n a -
Id. de exportación 450.000 contingente que p a g a n al gobierno g e - no de pasajeros resplandores. cido, al tender el poeta la vista sobre
U. de toneladas.... , 60.000 neral. No otra cosa nos sucede tioy al tomar c u a n t o en la sociedad le rodea; si la m a -
1 por iOO de aumento de exporta- Méjico, capital de la República, y r e - la pluma. £1 poema, cuyo ttíulo encabe- teria poética se le h a prestado fácilmen-
ción 140.000 sidencia de los supremos poderes, está za estas líneas, debido á uno de los e s - te y coo exuberante copia, no era en
2 por 100 de avería 210.000 á 700 pies sobre el nivel del m a r y se h a - critores que m a s laureles han cosechado verdad tan hacedero al adoptar la forma
Derecbos de internación 500.000 lla situada en u n valle ceñido por 67 le- e n la escena española, despierta en n o s - literaria, que más conviniese al fin y des-
Id. de inirodaccion de mooeda en g u a s de montes coronados de cedros y otros ideias tan h a l a g ü e ñ a s , confír m a n d ó - arrollo del referido per>samiento, por la
los puerto 300.000 ricos en marmoles y minerales. Son a m e - nos u n a vez m a s en la sustancial creen- misma importancia y m a g n i t u d del a s u n -
Contingente de los Estados, 1.011.000 nísimos sus alrededores y m u y fértiles cía de cuan despreciable es la v u l g a r opi- to, sobre que debía ejercer la sátira s a -
Renta del tableo, parte del gobier- en las producciones necesarias p a r a el nión de ser la poesía símbolo de fingi- ludable influencia. Porque t é n g a s e m u y
no según la contrata 650.000 abastecimiento de u n a g r a n ciudad. La miento y artificial l e n g u a g e de l a m e n - en cuenta: si no son dados al poeta fuer-
Naipes.,.., 20.000 p l a n t a de MéjícD es u n r e c t á n g u l o que tira. Porque nada h a y , en efecto, que r e - za y poder bastantes para atajar, con el
Correos 90.000 tiene de Norte á Sur 4.340 v a r a s caste- vele la verdad del sentimiento h u m a n o solo querer, el contagio de los males q u e
Contribuciones directas del distrito llanas y 3.640 de Oriente á Poniente; el con m a s fidelidad y vigor que el privile- le impresionan, g u i a d o de generoso alien-
y territorios.. 450.OOO piso es llano y las calles rectas de 14 va- giado acento de esta primera civilizado- to, procura señalar á tiempo los escollos
Alcabala sobre venta de fincas.... 50.000 ras de ancho y a l g u n a s de m á s . En vez ra de los pueblos; n a d a que muestre con que descubre en medio del conturbado
Casas de moneda 100.000
Lotería Da^ional 60.00
O
 CSEONICA HISPANO-^JÍERICA^'A. ¡9
5»
jMÓlago: y ni l o g r a r í a ser oido con v e r - m e r a s octívia^. Recordando tal v e z | a sen- aunque igiiores q\ié es bdsforo de Trac^it lías, a r m a n d o m á s de u n a vez la diest^^
dadero provecho por sus coetAueop, ni tencia de Marcial. y dónde etuá Aquisgran, ddoda Ragnsai del suicida, es la Bolsa, monstruo ÍHIS^-
descansaria tranquilo en el faUq de Ja • patéete perj*A/», rfiüa'jttfe éftu»; para iniciarte ea la alta diplomacia , ciable, c u y a s dolorosas «iricias h a n da^
posteridad, sino tuviera la fortuna de y pidiendo su azote ¡^ Horacio y J u v e n a l , te soplará de sopetón la musa, do ya más de una vez lastimoso asunto
sin que Versado estés ni pares mientes
Jttallar la forma adecuada de ia idea q«a le y en más cercanos" dias á un Argensola en el derecho patrio y el de gentes. á la musa de m u y distinguidos ingenios
inspira, apareciendo su obra como pie- o á un Quevedo, al propio^ tiempo q u é r e - •¿Q«iéo*ya para servir una embajada contemporáneos. El Sr. Bretón, á qtiien
d r a miliarin que fija los pasos dadog en cordabacou Cervantes q u e la s á t i r a per- al Orienté, al Ocaso, al Sur, al ^fo^te, ofende y r e p u g n a tan afrentoso cuadro,
el camino aa la perdición y evita c u e r d a - ^oes apio en e^ita patria afortunada, compendio, s u m a y barómetro da t e n e -
mente nuevos y mayores coyáicitos. sonal es, como la vil calumniav
si priva, pra en el club, ora en la c<5rte7 brosas maquinaciones, lleno de santa in-
'. .' .bajeza ¿Qaián uiega ya á un pariente, un camarada dignación, p r o r u m p e a l contemplarla, de
De tres maneras podia el Sr Bretón de qae áinfames premios y'désgraeiaB guia, correo, credencial y pas.aporte?
los Herreros trazar e l p l a n d e i s u libro, ó tenia presentes los desastrosos ejem- esta forma:
¿Qiiiép un sueldo noacenta en sus apuros,
llevando á cabo la no nada fácil empresa plares d é F o n s e c á , C á n d a m o y Lédesmá, de ocho, diez, quliice mi, veinte mil duros? ¡Oh Bolsa comercial, horrenda sima
q u e echaba sobre sus hombros: primara q u e escandalizaron la corte de Felipe IV, do tantas de inocentes se sepultan!...
Por esta senda prosigue el Sr. Bretón Harapientos, que ayer nos daban grima,
Creando una acción épico-cómica en que protesta de la rectitud de sus intencio-
dando á conocer los prodigios que obra por tí con su opulencia nos insultan,
el personaje principal, espuesto á todos nes esclamaudoí ya el alza, ya la baja, ya la prima
la desvergüenza p a r a con luistar á sus d e -
los peligros que nacen del estado de las llenan su cofre y su cartera abultan;
A los vicios combalé eñ general votos el asiento y lauro que solo debieran
costumbres políticas y sociales y del y si mal dadas van, ¿qué halla en su quiebra
Porqae yo no sé hseer sii ájjóldgía; a l c a n z a r l a acrisolada experiencia y el
choque irreftexivo de las pasiones y de Was Di un soio reíraio ilíiJividual el juez?... Uíja camisa... y de culeb.-a..,
saber consumado, no sin que deje de cla-
los vicios, pasara por el crisol de la es- - Asunto ha dado á k'paleta mil. Sb niulta y se eucarcelá al que en el monte
var, aunque de paso, el aguijón á la mis-
periencia, purificándose al fin en aras de Fiel á e s t e principio, q u e c o h o n e s t a y ma diplomacia, como tan dada á disfra- 6 en el cañé aventura dos pesetas;
la relig'ion, único puerto salva lor que en disminuye la reáponsabilidad'personal, y el que eu soberbia vence á Paeíonte,
zar la verdad, entrando después en el
medio de tantas borrascas descubrimos. hija de la forma direcía adoptada en todo; da pólizas tahúr y de carpetas,
ancho campo de ia política, estéril p a r a
Segunda. Ofreciéuduse él mismo, como f.l poema, da el Sr. Bretón de los H;rre-,' lejos de perseguirle un polizonte,
el bien, fértil en todo linaje de cizaña.
lo hicieron el Dante, el Archipreste de ros Comienzo á sU d-icil éímjiresa, no sin con el oro que apila en sus gavetas
Variado, múltiplo y por demás pintoresco
Hita, Lorenzo de Médicis y otros muchos, ^sponer en el prólo;.^ j ciertos' escrúpulos loa .servicios supliendo que le faltan,
co, es el cuadro que descubre aquí á
¿ ser centro, n u d o y termino de la a c - literarios y curiosa-, advertencias sobre compra veneras que su pecho esmaltan.
n u e s t r a vista, sacando á plaZa crecido T r a s e^ta dura, pero j u s t a y merecida
ción, presentando en cabeza propia el el discreto uso de metros y de rimas.
número de las miserias'y embelecos, de filípica, que sin herir á nadie personal-
triste ejemplo de las a m a r g u r a s y des- Una invocación dirigida, no al n u m e n las farándulas, farsas y trampantojos,
. e n g a ñ o s , de que es víctima en la socie-: del pudor, que de tiempo a n t i g u o h u y ó mente, a b r u m a r á sin duda á to los los
que hemos inventado en este siglo xix,: q u e t e n g a n sucia la conciencia, dedica el
,dad del siglo xix el hombre de siucera' de esta mí-;era tieri'a, sino al procaz á-i
para labrar la terrena felicidad, bien que autor del Pelo de la dehesa el canto VII á
fe ayuno en las las artes de la trápala y la Desvergüenza, que pdso én ella su mo-
perdonando no pocas de las p e r e g r i n a s , perseguir los vicios que inficionan la r e -
a g e u u á las iíifi,quíuacio!jKs drf tudus g é - rada, obre, pues, e l p o é m a qüe analiza-
artes que forman su interminable c a t á - pública da las letras, mostrando así, que
neros que trasforman á cada puulo la mosi siguiéndole u n a jiisía reparación en
logo, siquiera en gracia del público d e - .no la parcialidad ó malquerencia respee-
fortuna y lo porvenir da las familias. d e s a g r a v i o del bello sexo, c u y a s debili-
coro y obedeciendo á los preceptos da la Jto de n i n g u n a clase determinada, si no
Tercera. Espouiendo en sucesivos c u a - ; dades se condenan en el priih^T canto;
caridad cristiana. Ejercen en este c a m p o : el generoso anhelo del bien ha ins()irado
dros el complicado espectáculo de esas' conducta que d ^ u b r e de.sde luego la
con toda libertad su oficio las pandillas s u musa. La Desvergüenza impera t a m -
mismas costumbres, y señalaudo de una suerte de sátira que se propone ejercer
y recogen en él mies a b u n d a n t e cuantos bién en las pandillas literarias, dando á
manera abstracta los vicios que las co-i- B1 celebrado autor de la Marcela. En el
Proteos rinden adoración y vasallaje á la unos por n u m e n la maledicencia y la en-
t a m i n a n y las doleijcias que a m e n i z a n canto tercero comienza eu realidad el
desvergüenza, diosa á quien tiene la poli- vidia, furias infernales que sólo hacen
con lastimoso cí^ncer el cuerpo social, verdadero asunto de l i DesverSüenza; fi-
tica c o n s a g r a d a todas sus aras. presa en almas envilecidas, y patroci-
habiendo meenster de eficaz y pronto jando la vista en el g r a n cúmulo de m a -
cauterio, les que infestan la sociedad de nuestros Tal pro.ulamaalo paz, drden, justicia, nando en otros la servil adulación
sierpe escóndiJ» entre lozína yerba,
¿Cuál de estas formas literarias h u b i e - dias, da el autor cou uno de aqneilos conservadora llama á su milicia,
que osa rastrera
r a cumplido más adecuadamente á la que, naciendo en parte del carácter e s - porque el botiii sabroso le conserva: al mérito usurpar altos blasones,
, idea generadora y a u n á la materia poé- pecial de los españoles, produce hoy de- tjl, anhelando en ocasión propicia Ó y a quitando el freno á la ignorancia,
tica que se proponía fecundizar el autor sastrosos efectos siendo principalísima de oro y sangre saciar la sed proterva, que r e n e g a n d o de la ciencia y del e s t u -
.de la Desvergüenzan... Nosotros hubiéra- causa de los trastornos que á la continua clama (y le dan asenso muchos zotes): dio, y parodiando la barbarie de Ornar»
mos querido que el Sr. Bretón d é l o s padacemis. Tal es él espíritu de pandi- «Mi glorii^soa, mi amor ¡Oi smculoles.» condena al desprecio cuanto no es fruto
Herreros, esquivando la nota con que se, llaje que todo lo adultera y pervierte, TJI que rcjpubiicjoo si; iiilitula, d a s u osadía, así como el sucesor de Ma-
q u e todo lo subordina'al bastardo logro si en tribuna ó cafa, no sin violencia, homa puso en Alejandría fuego á c u a n -
h a preteüdido manchar el nombre de los, sus hipos nobiliarios di.simula,
d e ilegítimos intereses, y qüe a h o g a n d o -tos libros no hablaban de su ley. H é
generosos varones que h a u empleado la oi á sus hijos apea la excelencia,
con g á r r u l o clamoreo la voz del mérito aquí el retrato que hace el Sr. Bretón de
.segíiuda y reparando en las desventajas y de la virtud, enaltece y levanta á los y títulos y cruces acumula,
y al pobre hace llorar su dependencia. tistos cultivadores de las letras:
de la última, hubiese elegido la prime- altares del favor la nulidad y el vicio.
ra, ü a escritor cuya inveativa confiesan Este espectáculo, que y a por lo frecuente Tal, que humilde se postra al rey y á Dios, ¿Y á qué en aulas seguir cursos melódicos,
al par émulos y admiradores; ua poeta parece menos r e p u g n a n t e , no podia de- en secreto se mofa de ios dos. si ciencia universal nos inoculan
Y es de ver cuál se afaiía aquel Proteo, de balde, 6 poco menos, los periódicos
dramático, de quien puede con razón de- j a r de encender la j u s t a indignación del que, como hormigas, por Madrid pululan?
cirse que, así como el gran^Lope apuró poeta, quien al r e p a r a r e n el iüapério qüe cuando cambia el políiicu cariz,
para que note birlen el empleo .¿Y no hay manuales cien que i. precios módicos
todas las situaciones teatrales, apenas la Desvergüenza tiene á o b r e l a » pandillas, qne es su dogns y sn llbaro. ¡lofelizl... las nociones, que aquellos no acumulan,
h a dejado por bosquejar situación cómi- las pinta del siguiente modo:' No hay [iacbón amaestrado en el ojeo nos dan por el sistema homeopático
ca a l g u n a , debió comunicar al poema de de vista igual y de mejor nariz... raejor que el más insigne catedrático?
la Desv¿rgiíenza, en tal manera, concebi- Jánlanse, pues, en apiñado grupo Y aht es grano de anís ó de mostaza
do, extraurdmario movimiento, enrique- Y es de ver en los públicos comicios la vasta erudición que un hombre pesca
para ofensiva y defensiva alianza: en el café, eu el club y hasta en la plaza!...
ciéndolo con multiplicados accidentes cada cual contribuye coa so cupo bullir acá y aUi los caudidatos;
y cómo la echan todos de patricios, Que ya gratis se ganaa y á la fresca
originales, que hubieran dado Subido 6 de chisme ó de iadu^tria d de pujanza. grados de bachiller, y la trapaza
Tal que nada ea su vida hizo ni supo, aunque no pocos sean Mauregaios,
S r e c i o á l a creación poética, infundiéü-
ole, por última, aquel interés que siem-
p r e rodea á toda acción huoaana. Noble,
alK de ser omniscio el ddo alcanza:
lal que era ayer mis Umido que aa rorro
y á espuertas ofrecer los
al cuerpo electoral un pelagatos,
beneficios .suple al estudio, y al saber la gresca;
y aquel es reputado n^ás capaz
que se muestra más gárrulo y audaz.
es ya un Gaupolican denlro del corro. y la fe enumerar entre sus dotes
_.graHde y simpática habría sido también los Julianes, los Judas Iscariotes. El Sr. Bretón de los Herreros, pintan-
T si á la sociedad es tan noeivü
la lucha entre la virtud y el vicio, a r m a - solo un hombre protervo y petulante do asi los poetas cmijos y los escritm'es
da aquella de la severa razón, disfraza- Sentimos no poder s e g u i r copiando, si
¿qué será |oh Dios! un cuerpo coleotivo hemos de dar eu este artículo cabal r a - perdularios que invaden "el Parnaso y
do éste bajo cien máscaras seductoras; hecho coa levadura semejante?
y en cada tropiezo, en cada desengaño Meaos terrible el escuadrón argivo zón de la. desvergüenza. Superior al influ- conturban la paz de la república litera-
del protagonista h u b i e r a podido, s u m i - f t)é á las bijas de Prfaipo espilla te; jo, y a g e o o á las cabalas de partido, m i - ria, recuerda que discípulo y sucesor de
nistrarnos una lecciofi elocuente sin per- menos estragos hace la lanjosta de el Sr. Bretón con i g u a l vara á g ü e l - Inarco, es el padre del moderno teatro
donar clase, g e r a r q u í a ni estado, y g o - en la campiña de Ecija 6 de Amposta. fos y gibelinos, mónteseos y capuletos, cómico, y embiste con no menores bríos
zando, á favor del mismo plan, de toda Una vez instalada la pandilla, •ó como si dijéramos, realistas y republi- contra los que prostituyen la escena e s -
|ay del que no le rinda vasallaje! pañola , descargando su enojo sobre
espontaneidad y h o l g u r a en el aplauso canos, moderados y p r o g r e s i s t a s , con lo
ella es la'^or y nata de Castilla: aquellos que fingiendo un nuevo arte y
de lo bueno'y eu la condenación .de lo cual, al paso que da alta idea de la inde-
negar su omnipotencia es un ultraje: mintiendo una sociedad híbrida y a b -
vituperable. Y ¿qué no hubiera podido pendencia de s u espíritu, pone de resal-
si á Juan ensalza, es Dios; si á Pedra hamilia, to el afán con qne tantos artífices t r a b a - surda, h a n querido cohonestar sus estra-
hacer en la pintura dramática de los ti- apenas goza hoaores.de bagaje: víos, dando á sus míseros e n g e n d r o s el
pos que le h a n inspirado \a Desvergüenza, de honra y de prez se abroga el raonpoolio j a n en la g r a n d e obra de n u e s t r a r e g e - descabellado título -de comedia andaluza.
quien h a sabido transferir á la escena no y i su orgullo es mezqutno el Capitolio. neración, y sobre todo, la unidad de los Al fin exclama:
pequeña parte de esos mismos caracté- fines á qué aspiran, comparable solo á ia
Estos dispensadoresde famas, que fau- Acabe ya ese género bastardo
, res, genuinos representantes de la socie- tores del público, bien, se proclaman g e - comunidad de los medios. que á la razón y á la moral insulta,
dad española del siglo xix7.„ Dejando todavía m u c h a s espigas por
nuinos y úuicos ó r g a n o s de ia opinión y cosechar en los extensos dominios de la 6 sólo de Trlana y San Bernardo
Mas temiendo sin duda que se le t u - apóstoles de la verdad, cuando ói adoran polilica, tórnase el poeta al espectáculo se solace con él la plebe inculta.
viese por plagiario d« sí propio, ó y a es al becerro de oro, y si tieoen a l g u n a que ofrece entre nosotros el comercio; y La fruta coma de queabunda el Pardo
que se le acusase de poco fecundo, p r e - fe, es la púnica,—hallan, pues, en la reconociendo los imponderables benefi- el que tales oráculos cousulia,
firió el Sr. Bretón la última forma lite- caustica m u s a del Sr. Bretón merecido cios q u e proporciona á la h u m a n i d a d , y no más á la chachara de un drope -
raria de las indicadas, fundando la uni- p a n e g í r i c o , pintadas de m a n o m a e s t r a haciendo naturales en todos los pueblos se humille Moratin, sucumba Lope.
dad de toda la obra en la constante p r e - s u s trasfcMimacioues y estratégicos m o - los frutos más extraños y los productos Respeto g r a n d e nos inspira el autor de
sencia del poeta, que instruye al lector vimientos, en que pudieran d a r lección más bellos de las artes, tropieza en los la Desvergüenza cuando, terminado esta
en tono y con directo sentido didáctico, al mismo autor del Principe, sacáudole escollos con q u e el ansia hidrópica de canto y despuntados en el siguiente los
de los vicios y achaques que plagan el en el arte sutil de ia calumnia s o r p r e n - exorbitante g a n a n c i a , la usura y la. m a - aceros de su punzante musa en la donosa
siglo de g r a c i a en que virimoa, sin olvi- dentes ventajas. la fe han erizado el pacífico m a r del t r á - manía de los que se afanan por l e g a r á
dar al propio tiempo las ventajas reales La Diplomada, q u e s u s t í t u y e n d o al fu- fico honesto y civilizador, convirtiéndolo la posteridad su bella estampa, ú n i c a
que obtiene sobre los y a pasados. La v a - ror de las batallas Jas ingeniosas lides en fecunda fuente de fraudulentas q u i e - protección concedida en nuestros dias á
riedad y el interés no están por conse- del g a b i n e t e , h a p r ^ t a d o altos servicios bras y desastres. En este revuelto piéla- las nobles artes, señala con profundidad
cuencia en la forma literaria, ó lo que es á la h u m a n i d a d , despierta l u e g o la vis g o e n t r a el Sr. Bretón, exclamando: de filósofo las verdaderas causas de su
jo mismo, en el a r g u m e n t o ó fábula de táurica del poeta, apareciendo & s u s ojos, actual decadencia.
ia Desverdüenza, sino eu la materia poética si en otro tiempo ejercida por respetabi- No porque el arte saya i mf me aiaSa: ¿Y para quién trabajará el artista,
J i e la avalora; y a u n q u e bajo este p u u - lísimos varones, sujeta en nuestros dias que soy ea la aritmética oany porro, que obras quiera emprender de más empeño?...
*o de vista no faltará quien le n i e g u e al pernicioso influjo d é l a desvergüenxa, y el Creso más feliz quiebra ó me engaña, la iglesia conturbada y desprovista,
®1 título de poema, que por otra parte, que anteponiendo el provecho de unos si le cooSo el óbolo que ahorro, no es ya emporio á las arles del diseño,
solo le h a aplicado el autor «en s u acep- pocos al bien general del ÍSstado, todo lo y para mí no se hizo la cucaña y en este siglo Incrédulo, egoísta,
con que aquí cada día tanto zorro, superstieioa se llama ó vano sueño
ción más lata,» s e g ú n el prólogo advier- h a convertido eu patrimonio de las p a n - sin caudal,y sin mérito y gjn cuna, la ardiente fe católica y sincera
te, cúmplenos observar, no obstante, dillas. se encarama i los cuernos de la luna. del siglo de Murillo y de Ribera.
que l o g r a el Sr. Bretón con h a r t a s creces Maldita la aprensión y machaaadicia Pero el cáncer m á s terrible que devo- Sombra de lo que fué no es ya en Castilla
el fin propuesto é indicado desde las pri- y teodrás para lodo cieacia infata. ra al comercio y llena de luto á las fami- la aatigna solariega aristocracia;
y sin que yo de octava maravilla
 10 LA AMERICA.—AÑO XTÍII.—NUM. 8.

la califique, por ganar su gracia, se pasma,' se sonroja, se espirita, ESTUDIOS HISTÓRléO-POLÍTICOS se ejercitó por los magnates y caéi
ni eabrirla preiemJa de diaaciila y vela el rostro y pudorosa exclama: siempre en provecho propio. Nadie pue-
y á su costa ensalzar la ms&ocrácia, ¡Santo Dio«i qué inmoral es este drama! SOBOB fli. GOBlKftKO ANIIGDO OK ARAGÓN. de poner en duda la prepotencia de estas
ellees que en su habjiual muaíficeacia El duodécimo y tiltimo canto de la gentes hasta la abolición de tan árduó
fué á las arles segunda Providencia. Desvergüema lleva el título de Miscelatwa, IL
privilegio. ¿Pero quién con buena fortu-
Y también á Jas letras, que hallaron y es ea verdad una como taracea ó ca- Con reiterado esfuerzo se ha intentado na puede sostenerla, desde Pedro el Ce-
en nuestros antiguos proceres doctos jón de sastre, donde ha reunido el poeta, sostener, ea lo que llevamos dé gobier- remonioso en adelante? ¿Quién ponerla
cultivadores é ilústralos Mecenas. Pero para condenarlos en conjunto, otros vi- no representativo, la conveniencia, sino frente á frente del Justiciazgo, desde el
¿qué deben hoy más y otras á esos millo- cios y peligrosos achaques de nuestra necesidad, de que el.elemento .arístp.cxái- perfeccionamiento de esta magistratura?
narios del diluvio, que si construyen ca- época, pintándolos con iio menor -acier- tico se eleve á poder público eo nuestro Sometidos los ricos-hombres á su tri-
sas, lo hacen «velando noche y dia, por to. Al terminar, declara que merecería régimen Constitucional. Ágenos nosotros bunal en sus actos jurisdiccionales, go-
si pueden ahorrar medio ladrillo,» si sin duda el título de vate pesimista, al debate de las doctrinas que «n pro y en zaron aun de grandes inmunidades, pe-
compran cuadros, son las estampas de si venciendo el lemor con que batalla contra de esta reforma política se han ro sin prerogativa ninguna especial en
la Átala ó de Pablo y Virginia, y solo cantara la miiad de lo que calla: sustentado, nos atreveremos á hacer al- los negocios generales del reino. Cons-
cuentan en sus bibliotecas algún ejem- manifestación por demás verídica, bien guna incursión sobre este punto en el tituyeron uno de los brazos ó Estamentos
plar de los Secretos de Curvo, de la dono- que, con perdón sea dicho del Sr. Ére- campo déla historia, campo á que se han de -US Cortes, no tanto por su dignidad
sísima y entretenida novela de Bertoldo ton, noel titulo det^afó pesimista, sino el acogido unos y otros contendientes, y gerárquica, cuanto por ia concesión de
6 del Arte de cocina!... No sin consignar de íiombre honrado y generoso patricio donde cada cual se ha prometido sacar los servicios, que para las exigencias pú-
que hay alguno de estos nuevos aristó- le adjudicaríamos nosotros, aun descor- ventaja sobre su adversario. Verdad es blicas reclamaban los reyes; servicios
cratas, digno de consideración y de res- riendo por .completo el velo con que se que sus incursiones históricas se han ve- que tenían que soportar ellos, en su ma-
peto, por su explendidez y largueza de cubre la desvergüenza, siendo este uno rificado mas bien sobre las instituciones yor parte, honores que poseían, ó por su
príncipe, esgrime el poeta su justiciero de los más insignes servicios que ha po- castellanas que sobre Jas aragonesas; y dominio absoluto en los pocos pueblos de
látigo contra el vulgo de los que sólo dido hacer á esta nación infortunada. que el espíritu aristocrático predominó que pudieran considerarse como señores
tienen por Dios su refinado egoísmo, Porque, repitámoslo con entero conven- más en Aragón que en Castilla; y que feudales.
haciendo cínica ostentación de su avari- cimiento; el poeta satírico, cuando mues- bajo este concepto es más dificil el empe-
cia, en que vencen á los populares tipos tra limpia su alma de villanas envidias, ño por nosotros contraído; pero nuestras Pero aun en esta representación en que
del Gran Tacaño y de üon Marcos Mise- cuando lleno de. santa indignación de- convicciones nosalientan á no abando- tanto les iba, ni como ilispensadores de
rias, debidos al ingenio del picante La nuncia á la execración universal los vi- nar esta demanda. los tributos públicos, ni como legislado-
Hoz y del inmortal Quevedo. Las artes cios de su tiempo, sin enlodarse en el res del reino, tenían ventaja alguna, por
Con la abolición de los señoríos juris-
y oficios mecánicos llaman también en fango de ruines pasiones y venganzas, diccionales perdieron todo carácter polí- su aristocrática condición, sobre los de-
este canto la atención del Sr. Bretón, te- cumple uno de los más nobles y trascen- tico en ambas monarquías los señores más Estamentos. Aunque amagasen
niendo á petulante desvergüenza el fre- dentales ministerios de la poesía; obra de vasallos; y reducidos á la condición de unirse al del clero, y al de los caballeros
cuente error da confuudir al artista con tanto más digna y meritoria cuanto más meros propietarios de los terrenos, que é hidalgos, la unanimidad de brazos y de
el artífice y el artesauo, y doliéndose, so- espuesto se halla á ser blanco de odios é con pleno dominio poseían, sus derechos los votos de cada uno de ellos para hacer
bre todo, de la punible manía demenos- ingratitudes, si ya no es que la calumuia civiles no pueden granjearles suprema- las leyes, ponía al de las universidades
preciar cuanto es español, como si se busca en su vida ligeros lunares, para cía alguna política. ¿Tiene su dominio en el ca.so de impedir todo género de
hubiera agotado ya de todo punto el ta- pregonarle á vista da todos mentiroso algún signo característico que lo dife- prepotencia, todo perjuicio ó tuerto con-
lento que enalteció á nuestros abaelos; apóstol. tra los intereses populares.
rencie esencialmente del de los demás ter- Es verdad que los ricos-hombres ara-
mania grandemente perjudicial para el No puede aquejar temor semejante al ratenientes? ¿Son acaso de mejor índole
desarrollo de la industria y no menos Sr. Bretón de los Herreros, respetado de los fundos de los unos que los de los goneses, á diferencia de los castellanos,
vergonzosa para quien la abriga, por re- todos porsos virtudes públicas y domés- otros, ya que se tome la riqueza como tenían por derecho propio, asiento en las
velar la pequeñaz de su alma y su falta ticas, designado cual vis probas atqus pius medida de capacidad, como garantía de Cortes de Aragón; es verdad que sus re-
de patriotismo. yes no podían despojarles de su repre-
por cuantos se honran de confesársele orden? sentación, como más de una vez aconte
Cansado tal vez de tan desagradables amigos, aunque nofaltarásindudaquien, Pero necesita rodearse el trono de ma-
cuadros ó levantando sus investigadoras dañado su corazón, experimente triste- yor prestigio: necesita robustecerse, vi- ció en Castilla; es verdad que con estos
miradas á otra esfera, fijala.s el autor del za al verle ceñir esta nueva corona. La gorizarse con el brillo y esplendor de precedentes no se puede negar qae los
¿Qué dirán? en tres grandes dolencias de Desvergüenza revela en cada página, en nombres ilustres; y este patrimonio de ricos-hombres de naturaleza eran un ver-
nuestra sociedad, cuyas raices profundi- cada verso la rectitud de su alma, la gloria se halla vinculado en las familias dadero elemento político en aquel reino.
zan ya en demasía. Tales son el procaz templanza de sus personales ambiciones de la alta nobleza, y los mismos :iue con- Contra cualquier despojo que lastimase
esta prerogativaí hubiéranse ayudado de
valor, el mal entendido honor y la falsa y la mansedumbre de sus sentimientos, sideran la institución de la monarquía los fueros de la Union antes de PedroIV;
virtud, que viciando las verdaderas no- llevándole todas estas dotes á atenuar encarnada en el corazón de los españoles, y del remedio foral de la Firma ante el
ciones de la religión y de la moral, y con frecuencia el doloroso eíecto que pro- hácenla mendigar el apoyo subsidiario J usticia hasta Felipe V, y en ambos ca-
e.-traviando mas y mas los torcidos ins- ducen los cuadros por él trazados y á de otra institución, que ya no existe, sos, y más particularmente en el segun-
tiutüs de los diversos vulgos que consti- consignar coa entusiasme al lado de los iorque ha muerto da caducidad. Olvidan do, hubiera el monarca sucumbido en su
f
tuyen ia república, desnaturalizan y per- errores que nos ciegan, los aciertos que astimosaCaeate él único firmísimo asien- demanda. -
vierten todos los sentimientos,, relajan nos ilustran. Quisiéramosle, al bosquejar to, sobre que se levantan robustas é in-
los más sagrados vínculos y llenan cada unos y otros cuadros, más dramático y contrastables las instituciones políticas, el Y justa, por lo bien merecida, era esta
día de escándalo la sociedad entera. Se- á veces meaos didáctico; pero esta falta, firmisimum illud imperiun esl qao obedien- prerogativa, este derecho propio de t e -
guir paso á paso al poeta en la pintura si lo es, depende, como ya hemos dicho, tes gaudent, para sustituirlo sin duda con ner parte en la representación del pais,
de este triple y mortífero cáncer, seria de la forma literaria, adoptada desde lue- bases siempre deleznables y perecede- en el poder legislativo. Ellos hablan sido
en nosotros escesiva preteusioh, cuando go, debiendQ añadir quQ $i i{i .vaciedad ras. los verdaderos fundadores de la monar-
ya hemos aburado acaso de la paciencia existe princi almcnte en la materia poé- quía; ellos continuaron por mucho tiem-
de los lectores Conveniente creemos, sin tica, la unidad de todos los cuadros que Porque salo en las repúblicas nacien- po siendo los consejeros áulicos del mo-
embargo, trasladar aquí alguna de las justifica el título del libro, surge de su tes, en las sociedades de origen ecuestre narca; ellos los asesores del Justicia mis-
vigorosas pinceladas, con que aparecen idea generadora. Todos reconocen en efec- ó militar, ha sido elemento sólido de po- mo, antes de la completa organización
bosquejados ios estragos de tan lamen- to un mismo principio; la protesta de la der la aristocracia, y esto con progresi- del Justiciazgo. Yalgo conservaron siem-
tables vicios. Hablando del mentido va- virtud contra el vicio: todos caminan al va decadencia de su verdadera fuerza, pre e.stas ilustres razas, de los tiempos
lor, exclama: que tiende desde un principio, y confor- primitivos de la reconquista, enque sien-
mismo fin: el castigo de la depravación, me el tietopo va asimilando los intere- do el monarca mués dése ipsis paribus nun-
¿Más qué diré del que por ser maestro que halla su fórmula capital en la des- ses especiales del nuevo Estado, hacia la ca pasó de ser primas int¿r cequales. Ele-
en acertar al blanco y en la esgrima, vergüenza. preponderancia definieres general sobre mento político fué la rica hombría en la
con sarcílslica lengua y con siniestro ¿Y qué diremos de los medios de eje- todos los intereses especiales y de cate- Constitución aragonesa; y si es cierto
mirar, que en los pacatos pone grima, cución, estoes, délas formas meramen- goría.
pelillos busca hasta en el Padre Nuestro, . _ ue su preponderancia en el Estado fué
que es fuerza que la pólvora dirima,
si finge, ó se le poue en la cabeza '
te artísticas? iiespues de tantos y tan
notables pasages como llevamos copia- regeneradores de este sistema de razas, 3
Empeío; desesperanzados sin duda los ecayendo, conforma á poder de los si-
que hüy segunda inteucíon en quien lo reza? dos, séanos permitido arrojar aquí la en la discusión doctrinal, hubieron de glos se iban alejando de los primeros
Si horrible, aun sin ventaja, un desafio pluma. Alosque juzguen que el verda- acojerse al baluarte de la historia, para- orígenes del reino; y conforme el clero
del Dios de paz y amor la sacrosanta dero lauro de las artes estriba únicamen- petándose en él para hacer roitro á los fué constituyéndose en brazo aparte de
ley conculca y la humana, cuando implo te en los ápices de metros y rimas y en tiros qye les asesta la moderna civiliza - los otros Estamentos; y á medida que las
sobre seguro un indnslrao las quebranta, los pormenores de dicción y de estilo, re- cion, la nueva manera de ser y de exis- uuiversidádes se elevaban a poder, inde-
y Cabe el cuerpo inanimado y frió cordaremos, sin embargo, la siguiente tir de nuestra organización actual. pendiente y casi soberano;' también lo
del Imbele rival su triunfo canta,
que á funesta pericia sák) debe, ané(¥dota, que nos parece venir de molde:. No tratamos de invadir la historia cas- es que si bien pocas en número, fueron
aquellas familias privilegiadas, de gran-
¿qué timbre gaua?... El de asesino aleve. Pintaba Pablo de Céspedes, • tan cele-, tellana en este punto: allá se las haya de prestigio y autoridad por sü noble
brado en la -historia de las Bellas Artes'
Entre los muchos notables rasgos que como en la de-las letras, el gran cuadro con sns concilios toledanos, donde tan origen, y fuertes y poderosas cotno muy
describen bajo diversos aspectos el equi- de la Cena, donde hizo gala da su inge- poca ó ninguna rapresentadou tenia la heredadas que eran en tüdos 'j cada uno
vocado honor de nuestros coetáneos, ha- nio y largos estudios, no solo en la con- clase de legos: con sus condes palatiaos.^ de los importantes estados de aquel rei-
llamos el siguidnte: después séquito oficial déla regia ma- no. Porque hay que responder aquí á
cepción de esta famosa obra, siho más gestad:iaHá con sus Cortes tan desme- ciertas indicaciones que se nos hacen de
Ostenta el fausto de marqués 6 conde principalmente al dar vida y expresión á' dradaseo-su, poder legislativo, y donde continuo, sobre la menguada importan-
oiro que no ha heredado una tahulla— la figura del Salvador y al bosquejar las la asistencia dé' las clases privilegiadas cia que á la corona aragoue.sa se conce-
¿i'iies (ie ddiide le viene?—¿Qué de donde?... varoniles cabezas de los apóstoles. Los vino en último resultado, á convertirse de, recordando á los que tan en poco nos
Ütíl juego.—¿Tiene suerte?~Las enfulla. que iban á verle celebraban mucho cier- en metcedi-que se concedía ó denegaba tienen, que nuestros mayores termina-
Mas por el reo que en su casa esconde, tos vasos yjamoues que hay en an apa- á'vottiütad deJaoberano. Nuestro propó- ron la cofiqnitfta del territorio peninsular
lejos de denunciarle á la patrulla,
arrostrará mil muertes temerario: rador, sin atender al mérito de la com- sito fué prob.w; que en la monarquía ara- á ellos designado, tres siglos antes que
que honor le manda ser hospitalario. posición, niá la esceleneía de las figu- gonesa, la decadencia política de sus ri-. la poderosa Castilla, á quien como mues-
ras. Viendo un dia Céspedes que á todos,
Ponderada la virtud de la atea despreo- se les iban los ojos tras aqnel juguete^ eos-hombres no significó la ruina de su tra de buena Vecindad, regalaron la del
cupación y de la hipócrita moralidad, lleno de indigíiacion'exclamó, diciendo libertad, y probado quedó este estre- reino de Murcia; y que, mal contenido su
añade respecto de la tiltima; mo en nuestro anteritwartículo. Nu«strq esfuerzo dentro da sus linderos, saliéron-
á un discípulo suyo: déáignio es hoy consignar que ia inter- se allende los mares para esmaltar su
Mas tanto de ese nombre bendecido —«¡Andrés, bórralo, bórralo luego; quí- vención de. nuestros barones en las Cor- corona con importantes y numerosas
como del noinbre del honor se abusa: talo de ahí! Pues no se repara eu tantas tea, tuvo una- razón especial de aquéllas conquistas, llegando hasta adquirir por
lo invoca sin escrúpulo el perdido cabezas, figuras, movimientos y manos, institueiDoes; que de todo punto ha des-^ fuerza de armas derechos muy legítimos
_ que por tío trabajar vende la blusa, que con tanto cuidado y estudio ho he- apareeldsrentre noaotros.
y el que la ley más santa da al olvido ; é incontestables al trono de Con.-^tantino-
cho, y reparan en esta impertinencia.»
y auéiiimos sus h:jüs ala Inclusa;, ''''A'süS riéos-hombres debió su estable- pla. Sus ricos-hombres, que tanta parte
y hasta el que hurla un millón, jugando en falso JOSÉ AMADOR DB LOS EIOS, cimiento 'la corona'aragonesa*:' pdcciO'iá- tuvieron en la gloria y botín de estas ad-
contra el que roba uu pan pide el cadalso. da desde un principio está institución, quisiciones, acrecentaron su importan-
¿Y ((líiéa no ha visio alguna Magdalena Madrid, Febrero de 1857. resá-vóse el reino el derecho de ayuntar- cia con sus riquezas, y sus pingües acos-
(pecadora se entiende, no contrita)
que se da en espectáculo á ia escena se contra los desafueros de los monar- tamientos en su patria originaria, y en
más que rl ador que su papel recita, cas, y este dereeho, consignado en favor Mallorca y en Valencia-, y en Ñapóles y
y si un corjccpío equívoco resuena, del común de los ciudadanos, siempre en Sicilia, y en Córcega y enRosellon, y

en Cerdeña, los pusieron á la cabeza de
todas las aristocracias de su época. Sub-
ditos aragoneses hubo que igualaron, si
no escedieron, por su colosal fortuna á
los más poderosos monarcas de su tiem-
)o; y almirantes tuvo su armada que al
} leñar los m s u s con la gloria de su nom-
"bre, allegó i u el suelo de sus conquistas
mayores estados que ningún potentado
de aquellos tiempos.
Nosotros pues, que hemos tomado á
empeño sostener la Índole popular de las
instituciones aragonesas, no negáremos
hoy la significación política de nuestra
aristocracia, puesto que no pueden de-
fender la suya en su reino los grandes
de Castilla, con igual ventaja: pero aun
asi, y concediendo á nuestros ricos-hom-
bres lo que tan de suyo les pertenece, y
lo que nuestra veneración á tan ilustres
casas les concedió siempre, porsus gran-
des hechos, por sus eminentes servicios,
por suá altísimos merecimientos, no ¡ o-
demos menos de sentar hoy, que su ca-
rácter político cesó de todo punto con su
seflorlo jurisdiccional, y que resucitar
en nuestros días su antigua significación
seria un mal engendro, destituido de
condiciones de vida, un anacronismo, be-
llo acaso, pero imposible.
Sin más derechos hoy en las tierras de
su dominio que los de nuevos propieta-
rios; despojados en su personalidad de la
representación de los pueblos, de sus ho-
nores; privados de su inmunidad contra
ciertas sanciones penales, ¿qué punto de
apoyo tiene esa investidura política que
para ellos se reclama? ¿No fueron sus de-
rechos señoriales la base sobre que des-
cansa y de donde traía su origen?
Más esto aparte, y tornando á nuestro
propó.sito, diremos que hay designio en
estremar el espíritu nobiliario que se
atribuye á las instituciones de nuestro
reino; y que este empeño, en vez de per-
der fuerzas con los estudios históricos,
en vez de decaecer conforme la buena
crítica va penetrando en los arcanos de
lo pasado, crece y se desarrolla con pu-
janza en estos tiempos de escepticismo
político, menos para dar cuerpo á los
errores, á las consejas que puedan ro-
bustecer esa reacción violenta que tan
desapoderadamente hoy entre nosotros
predomina.
Y si este linaje de estravíos corriera
con buena fortuna, solo entre gentes
Vulgares de las que en vez de escudriñar
los . antiguos libros historiales, páranse
siempre en la corteza sobre la haz de los
acontecimientos, seria muy de tolerar el
daño; perú cuando de ellas hay y no po-
cas, que en el peso de su autoridad lle-
van la convicción que su legítimo ma-
gisterio les da; cuando se v • que el error
nace de la equivocada siguificacion po-
lítica de una voz, que en el diccionario
aragonés lleva muy diverso sentido que
en el de Castilla; cuando en sitio y oca-
sión, los más autorizados para las lec-
ciones históricas, se toma á grave daño
Un mal resabio de épocas pasadas, que
lia llegado por su pié hasta la nuestra,
pero muerto ya por su propio despresti-
gio, ¿será posible guardar silencio con-
tra tal abuso?
De estremada afición á los privilegios
se acuáa al pueblo aragonés y de resen-
tirse en sus instituciones de su espíritu
escesivamente nobiliario; y como ambas
apreciaciones, nazcan y se derivan, en
nuestro concepto de muy paladinos erro-
res, lícito nos habrá de ser el que diga-
mos sobre ellos dos palabras.
Pero téngase en cuenta que al espli-
carlas, nada más lejos de nosotros que
rebajar la importancia que tan legítima-
mente adquirieron en nuestro reino los
ricos-hombres.
Fundadores, primero, de la monar
quía: compañeros después y siempre del
monarca, mas bien que subditos, pare-
cieron en un principio sus socios, sus
•Compartícipes en el ejercicio del poder.
Al cüa.-:igDar las prerogativas de la coro-
na, al discernirle sus atribaciones, reser-
váronse de ellas las que más al caso les
Pareció para sostener y afianzar su in-
flueLciü, podero-sa, inmediata, en elgo-
"bierno del pnís. Pocas, muy pocas co^as
podían hacer los reyes sin t u consejo:
nínguiiu absolutamente contra él. Pro-
curaron quedarse con gran parte del po-
der, y esto era natural en quienes, á su
nbre albedrío, iban á distribuirlo: creá-
ronse una categoría muy próxima, muy
Parecida á la del trono, y esto era hartó
"Cito á los que habían con sus esfúerábs
Conquistado el territorio sobre que sé le-
CRÓNICA HISPANO-AMERICANA. 11
vantaba, y muy propio de los que crea- ni se estendió nunca al brazo de las uni- sus estudios se han mirado siempre con
ban esta nueva dignidad; versidades. desden por los repúblicos que en este cen-
En Asturias uu godo, de sangre real, ¿Y qué mucho que este mal resabio de tro nacional bullen y se agrupan par»
fué el primero que levantó el estandarte otros tiempos se autorizase en los de Fe- entender en constituirlas y gobernarlas.
de la insurrección para proclamar la in- lipe II, y esto en uno de los Estamentos ¡Plegué al cielo que en el curso de los
dependencia del país; como caudillo y de la nobleza? ¿Se vedó por ventura la acontecimientos no se resientan dema-
jefe, allegó y capitaneó la hueste: como entrada de estas clases en el Estamento siado nuestras reformas diplomáticas del
heredero de la dinastía sumergida en las popular? ¿Y no era este igual en faculta- desden con que se tratan los hábitos,
aguas del Guadalete, se presentó impro- des á los otros tres de que se componía costumbres, legislación de partes muy
visadamente sentado en el trono de sus la representación nacional? ¿Y era de importantes de esta monarquía! Las con-
mayores. menos ley su voto, ni menos poderoso secuencias de tal olvido, de tan marcado
tampoco para impedir la confección de desprecio pudieran ser lamentables ea
En Sobrarbe se lefvanta ua trono nue- más de un concepto. (1)
vo, y como tal. Tacante; el estableci- un fuero desfavorable á los derechos é
miento de la monarquía se discutió antes intereses populares? No para remediar el mal, ni aun para
de deliberar sobre él; y los que el acuer- Lástima grande es que así se apre- prevenir el daño (llenando el vacío que
do de adoptarla tomaron, dieron la nue- cien y avaloren hechos de tan escasa im- en esta clase de estudios se advierte),
portancia, para calificar desventajosa- porque tal empeño escede á nuestras
va dignidad al que eligieron por mejor, fuerzas, sino .para llamar la atención de
pero se la condicionaron en la forma que mente nuestras antiguas instituciones, y
que así se deduzcan consecuencias del otros hacia este trabajo, nos hemos pro-
les plugo y tuvieron por más conve- puesto dar algunos artículos histórico-
niente. diferente escaño que cada uno de los
brazos ocupaba cuando todos eran igua- politicos sobre una de esas partes de que
De aquí la diferencia de ambas aristo- les y todos tenían igual investidura le- se compone nuestranacionalidad; sóbrela
cracias, castellana y aragonesa; de aquí gislativa. del reino de Aragón. Desembarazados de
la mayor importancia política de la una Y aunque así no hubiera acontecido, las dos cuestiones preliminares, ó mejor,
sobre la otra. aunque la exclusión de que nos ocupa- .incidentales, que han dado margen á lo»
Pero aparte de la,« inmunidades perso- mos, hubiera sido absoluta para todos dos primeros, entraremos de lleno en los
nales que en su favor dejaron consigna- los Estamentos, ¿puede tomarse á esce- diferentes puntos de su antigua organi-
das en el nuevo Es lado, los fueros dul sivamente nobiliario el espíritu que la zación que consideremos más importan-
reino y las garantías políticas en ellos dictó en aquella época, cuando en esta tes. Si á bien se toma nuestro buen de-
contenidas fueron generales para todas nuestra, y después del-vuelo que han seo, otros más afortunados le darán ci-
las clases que lo constituían, y las uni- tomado las artes industriales, y la con- ma, que no faltan en la antigua coroni-
versidades formaron desde un principio sideración justa y legítima que se les ha lla buenos ingenios, bastantes para lle-
uno de los brazos de sus Cortes, y en es- concedido desde el reinado de Carlos III var á cabo tan laudable empresa; porque
tas se hicieron todas las leye^ del reino; en adelante, todavía se ha conservado para satisfacer nuestro entusiasmo por
porque nunca en su Código existió fuero la obra de nuestros mayores, basta y
entre nosotros tan ridicula exclusión, no sobra con haber indicado el camino.
alguno promulgado por la corona sin su en uno sino en muchos cuerpos colegia-
acuerdo, ó como en ellos se dice de la dos de este siglo? Regístrense sus Esta- MANUEL LASALA.
voluntad de la corte. tutos; examínense los expedientes de ad-
Mas la importancia política de los ri- misión da sus individuos, y en ellos se
cos-hombres fué desde un principio echará de ver la tendencia de sus infor-
maciones, y cómo algunas, si no todas BIOGRAFÍA.—BERANGER.
puesto que .poco á poco, perdiendo su vi-
gor y fuerzas conforme caminaba la las clases marcadas en los fueros de 1585
Constitución del Estado á su completo y 1592, se hallan anatematizadas en el Telegráficamente se anunció á Euro-
desarrollo; y los escándalos y frecuentes primer tercio de este siglo que corremos. pa y al mundo, primero la enferme-
disturbios que lo traían en continuo de- Con gran ligereza se han solido califi- dad, y después la muerte del nieto de un
sasosiego, creando la necesidad de su car casi siempre las mal estudiadas ins- pobre sastre; de un parisiense, que en
ref resion, hasta que el buen seso de Pe- tituciones de la coronilla; pero esta es la adolescencia, fué mozo de posada, y
dro IV, y su amor al reino, pusieron coto la suerte, que en este, como en otros que dedicado á cajista de imprenta no
á estos desórdenes, en favor del fuero puntos, ccrren todos los pueblos que pier- pa-->ó del aprendizaje, y que, habiendo
común, de las instituciones mismas del den su propia nacionalidad, aceptando conseguido un empleo, nunca tuvo más
país; por más que su carácter se prestase por amor al país común, la de oíros rei- asignación anual que la de mil doscien-
tanto á l03 violentos desahogos de la na- nos que presumen sobrepujarlos en im- tos francos. Al propio tiempo que la no-
tural á que era tan inclinado, y por más portancia. Mírese ¡mal pecado! la cues-
ticia de su muerte, vino la de que el em-
que tuviese levantada en su niano la es- tión bajo este punto de vista desde Feli- perador de los franceses costeaba sus fu-
pada de la victoria, cuando concibió y pe V acá: harto rubor nos cuesta confe-
llevó á cabo la verdadera organización nerales. Y á nadie puede causar asombro
sarlo: ¿pero porqué se nos coüsideró de tales distinciones, pues haca mas da
politica del reino aragonés. igual manera hasta Carlos II? cuarenta años que era popularísimo en
Después de estas indicaciones. cúm- ¿Tan poco contribuyó en vida el rey Francifi y sonaba con aplauso en todas
plenos manifestar el origen de donde, en católico al engrandecimieuto de la heren- partes el nombre de quien ha sido obje-
nuestro concepto, trae su corriente esa cia de su esposa Doña Isabel? ¿Tan poco to de ellas. Beranger se llamaba; poeta
excesiva afición á las clases privilegia- ganó en Estados con su muerte la corona le hizo Dios al darle vida; jamás aspiró á
das que malamente se atribuye á los ara- de Castilla? ¿Hánse de todo en todo olvi- otro título que al de cancionero; el pue-
goneses de aqui'l antiguo régimen. Los dado los servicios de nuestro reino en blo fué su musa; la ventura de la huma-
privilegios en el reino de Aragón nunca tantas memorables ocasiones, en que tan nidad su sueño constante; en habe.'- adi-
se tomaron, como en los demás puntos bizarramente procuró antes de su ane- vinado el gran partido que para el triun-
de la Península, á leyes excepcionales xión el acrecentamiento de su gloria y fo de la causa de la libertad, podía
en favor de señaladas clases ni personas: su poder? sacarse de un género de poesía, eminen-
nunca envolvieron gracia ni prerogati- ¿Tanto les vá á los empequeñecedores temente nacional en su patria, estriba la
va alguna para libertar á uno ó á mu- de nuestro antiguo reino en olvidar la base de su gloria.
chos de los gravámenes generales, ni célebre batalla de Roncesvalles en el si- Nada más ocioso que consultar bió-
conferir derechos de que no gozasen los glo vni, las de übeda y las Navas de To- grafos ni críticos para conocer a ';sta
demás. Denominábanse así los fueros losa, tiempos andando, la de la toma de hombre enainente; pintado se haila al
que tenían el carácter de leyes genera- Toledo bajo Alonso VI, y las tantas y natural en sus canciones. De su naci-
les donde se consignaba alguna garan- tantas empresas en que los aragoneses miento y varia fortuna durante sus pri-
tía, algún presidio político que afianzaba tomaron parte, eu África, en Asia, en meros años habla en la canción que sa
más y más la indemnidad de la ciuda- Europa? titula El sastre y la hada; en la de El vi-
danía aragonés i; y de aquí el llamarse Pero dejando á un lado todo esto, que llano, blasona de no traer su oríg-'^n da
privilegio general la nueva tabla de de- eu olor de ranciedad podrá calificarse antigua nobleza; la de Buenas-noches o,--
rechos otorgada en tiempo de Pedro I, acaso de antigualla inatendible, léanse tá dedicada á M. Laisuey, duefi > de ia
tabla que se ha querido comparar con la los testamentos de Doña Isabel y de imprenta donde estuvo de apr-iiáiz oa
Carta Magna de Inglaterra: por eso se Don Fernando, y por ambas cédulas se Peronna; su tomo último á Ijuciano Ba-
apellidaron privilegios los fueros de la verá la parte de herencia que á cada naparte, que el año de 1803 le c d i ó g í -
Union concebidos por Alonso III; y por cual de sus abuelos debió el hijo de Doña nerosamente los gages do que disfru'.aba
eso, en fiu, eran privilegios también, el Juana la loca. como miembro del Instituto, para alen-
de la Manifestación y el de la Firma, que Prolijo ademas seria reseñar ahora los tarle cuando empezaba k enriquecer la
tan sobre seguro se alzaban contra toda. estados y títulos con que se enriqueció poesía, su canción titulada Las aves fuá
clase dedesafuero.s. No eran dadas, pues, entonces la corona de Castilla, é impor- escrita al partir para su destierro M. An-
estas leyes por pro ó por honra de algunos tuno también indicar cuan mal se ha tonio Arnault, á quien debia su modesta
homes ó lugares é non de todos comunalmen- sabido conservar tan opulenta herencia. enpleo en la secretaría de la Univ •;sidad
te, y de aquí el error de considerar estos Los reyes de Aragón fueron tan solícitos parisiense; amigos suyos fuerou y la
fueros corno leyes de éscepcion; y de y ganosos de acrecentar sus estados, co- inspiraron bellas canciones, entre otros
aquí también el atribuir á los aragone- mo desafortunados algunos de sus here- personajes, Chateaubriand, á quien llama
ses excesiva afición á las clases privile- deros en la fácil empresa de conservar- &\ mayor escritor del siglo; Lafayette, cu-
giadas por los extraordinarios esfuerzos los. Mas lo que auu les queda bien me- ya vida comparó á un docto libro, concebi-
con que en muy señaladas ocasioiies de- rece la pena de tomarlos en cuenta, para do, dictado y transcrito por la virtud, don-
fendían sus privilegios comunales, es de- apetecer su conservación, para dar algo de brilla la gtoria y tiene su página cada
cir, sus garantías ó presidios políticos. á sus intereses, á sus leyes, á sus hábitos
(i) Ignoraino'! cuáles y cuántos sesn los jn-
Y aunque de diferente .índole, no es á sus costumbres, en el progreso orgá- riscoosolios catalanes, valencianos y aragoneses
menos itfundada, la apreciación de ha- nico de esta nacioíi tan varia y tan com- que haya en la comisioa eocargada de redactar
berse resentido demasiadamente nuestro pleja por las diferentes y tan diversas el proyecto del Cdiügo civil de España. Acaso
antiguo gobierno del espíritu nobiliario, partes que su todo componen. ao merezcan tomarse en caeaia los usos, fuero»
apoyácdose en qUe los oficiales de arte^, Empero para ello se necesita estudiar y Cfcstunnbres de cada uno de estos aoiiguas rei-
mecánicas, y otros á este tenor, no fue- á fondo su historia y las condiciones so- nos, ni los intereses creaJos á su sombra, ui la
manera especial de str y de exiátir en el tírden
sen admitidos al brazo de cabaiteros é ciales que les son características, y sus civil que taaios siglas lleva de existencia, ni el
hidalgos, por costumbre firimero, y des- leyes civiles y sus establecimientos polí- universal trastorno qne habrá de producir en las
pués poiifuero expreso de las Cortes de ticos; y tarea es esta de mera recreación familias el cambio súbito y radical qun haya de
1586 ^ 1598-, porque esta exclusión ni ó pasatiempo para los pocos que de vez recibir en la nueva codíliczcioo, ^.uesio que en
coflsió'éxpresámetite,' cohib sé Vé, sino en cuando suelen ocuparse de ella pn la este panto sean meaos de estudiar estas legisla-
én la decadencia política d& n'uestro reiao metrópoli do las provincias espaijülas y ciones especiales, que la general de Castilla.
 12 LA AMERICA —AÍsO XVII.—ÑÜM: 8.'

dia sin una sola errula; Toat pour la li- itinerario, ya dedicando á ia memoria de , «artesones ha acudido la.libertad 4 vues- «trasmitirá pocos juicios equitativos so-,
berté, eegua sas propias éépresionea Laf*| Napoleón y á los triunfos de Francia su- ' »tro lado y sé oS afrece por apoyo. ; »'bfe los contemporáneos que ocupan ó_
fite de quicD dijo qué en nuestro tiempo bli.oies cantos como el El Dios délas mte- ^ «Lo que es yo voy & taatar sus betiéti- «han ocupado la escena, que hac apuQ-;
era el único hmnbfe^te habla sabido hacer naé^entes, La antigua bandera, El cinco de «cioB en la m\ie. Ai crearme Dios me dijo: «tado á los actores d obstruido los pasi-"
popular la ripwM: Mayó, fíecuerdos del pueblo, JE/ vióliríroto, :»iV« seas nada.» ' • !»11D3. A gran húmero de hombres he.
Con encantó háoia memoria Berangrer La xanlinsra. El campo de asilo; ya ridí- Su degaficioíli*á figurar le produjo cen - •cohooido de los qué se han señalad»'
de la toma de la Bastilla, priiner suceso culizando'á los franceses que no se son- suras qué enuncia y á que responde' de ;»durante los últimos veinte años; sobre
que hirió su in\aginacion de niño: bajo rojaban de ansiar el triunfo de los ejérci- este modo: «Haciendo sobrado hpnór á «casi todos aquellos á quienes no he vis-
la RepúblicH aprendió ¿adorar A su pa- tos estranjeros, ó satirizando la política >rlo3qne lesplacedenominar mi btíéna ca- ,«to ó no he hecho más que entrever, mi
tria; y puso muy luegro á su servicio ei del gobierno de Luis XVIII en canciones «beza, y olvidando 10 mucho que dista el :«memoria ha receñido porción de hechos
numen que debía al cíelo. Ya'sé habia como El marqués de Carabas, La escara- «simple buen sentido de la ciencia délos «más ó menos característicos. Quiero
dicho en Francia que la caución era la pelablanca. La santa alíamü berberisca. El «granies negtxcios, pretenden estos cen- «formar una especie de Diccionario his-
expresión de los sentimientos populares, ventrudo en las elecciones, de 1818 y lai de «sores que mis consejos hubieían jlumi- «tórico, en que bajo el nombre da cada
cuando Berang^r se aplicó de lleno á es- 1819, J.os padres reveitndos. Los monicacos «uado a másde ua ministro. En su coa^- «una de nuestras notabilidades políticas;
te género de poesía, después de maripo- ó los funerales de Aquiles, ti hijo de bue}ia M^epto, agachado, yo detrás dala poltro- «y literarias, modernas ó antiguas, ven-
sear en todoí. Habiendo empezado á in casa, y por no citar otras muchas, La «na de terciopelo; de nuestros hombres «gan á clasificarse mis recuerdos y los
tervenir el pueblo en los negocios del nueva orden del dia, compuesto para «de Estado hubiera conjurado los vieu- «juiciosqutí me permita emitir, o q u e
Estado desde 1789, sus sentimientos y distribuirla al ejército francés antes de «tos, desvanecido las tempestades, y he- «tome de autoridades competentes.»-—
sus ideas patrióticas adquiriel-on un ue invadiera la España á las ór lenes del «cho nadar.la Francia en un Océano de Preguntándole cómo llevaba este traba-
3
grandísimo desarrollo, y naturalmente uque dedo Angulema con el objeto de «delicias. Todos tendríamos libertad que jo, me respondió que lo habia abandona-
la canción debia remontarse á la altura que no traspusiera los Pirineos y restau- «reyeader ó más bien que dar de regalo, do muy á los principios por ahorrarse de
de las impresiones de alegría ó de triste- rara la libertad francesa, en vez de venir »pues aun no sabemos ¡o mucho que va- la amargura de tratar severamente á al-
za que los triunfos ó los desastres produ- á matar ¡a española. »le. Ea, señores, mis dps ó tres amigos, gunos de sus amigos qui n'on tenn paroíei
jeran eñ la clase más numerosa. Ya el Varias son las canciones en que predi- «que tomáis á un cancionero por un tales fueron sus espresioues. Le fui deu-
vino y el amor no podían suministrar jo la caida de la rama primogénita de «mágico, ¿uo se os ha dicho que ei po- dor de muy benévola acogida, y de ella
cuadros para las ideas que preocupaban los Borbones de Francia. Ninguua más >> poder es una campana, que uo permite me dio señales, regalándome un ejem-
al paeblo exaltado por la revolución, y notable que la titulada Los dos primos ó «oír ningún otro sonido al que la echa á plar de sus canciones, cou uua dedicato-
ya no solo con los m iridos engañados, carta de un peqmño rey á unpc'quíño du «vuelo?» ria de su puño y letra, que tengo en
los procuradores codiciosos y la barCade que; esto es, del que fué rey de liorna al Tres años más tarde daba á luz el úl- grandísima estima, y ]eyéiid.)me coa
Aqueronte, ijodia nadie alcanzar el ho- que fué duque de Burdeos. Dus de sus timo tomo de sus canciones, y se despe- aire de profecía su cincioa titulada Et
nor de ser cantado por los artesanos y-los estrofas bas-taráu á dar alguna idea de día del público eu un prólogo sentida- diluv'u), no impresa aun entonca3.
soldados en las mesas de los figones. Ni su. importancia, aunque traducidas de mente escrito, dnndo razón de la historia Para las elecciones de la Asamblea,
bastaba tampoco este triunfo siuo que era escelentes vei'sos á mala prosa. de sus inspiraciones, exortaudo á la ju- constituyente le presentaron sus amigos
menester que la nueva espresion de los KMecído fui por los que te-hacen ver- ventud de esperanzas, con la cual estu- en uno de los distritos de París el año
sentimieíitos populares se abriera paso á osos, canciones, poemas; á semejanza de vo siempre en afectuoso contacto, á cul- de 1849 como candidato,, y salió elegido
los srtíones para hac^r allí conquistas en "los confiteros se alborozan con todos los tivar las letras para el pueblo, blasonan- á pesar de sus esfuerzos para que no se
interés de estos sentimientos, lo cual "bautizos. Tu alma cristiana van á lavar do de alumno de Chateaubriand en gus- le dieran los votos., enviando á todos los
exigía también que el estilo y la poesía "las aguas de uu río bien mundano; á to literario, mostrándose muy agradaci- periódicos una comunicación eu que de-
de la caución se jierfeccionaran. »mí me ofrecieron agua del Jordán, y doá la imprenta. claraba sinceramente que auto 'el públi-
Toilas §stas reñexioues hace Beranger »sin embargo, estoy eu Viena.» De Bjranger puedo yo decir que fue co noservia de nada, y que para él em-
para justificarse del cargo que se le ha «Si tú creces junto al trono, y yo ve- mi más íntimo compañero de viaje a-1 pezaba el público donde liabia más de
dirigido repetidamente por haber pulsa- "gétosin poder, confundo á esos corte- regresar de la isla de Cuba á mi pá'ria, tres ó cuatro personas. Mny.lu-go de
do su lira eu tono más sublime que los «sanos malditos, recordándoles mi naci- eu la primavera de 1841; leyendo y es- r:unida la Asamblea hizo renuucia del
cancioneros anteriores, y se expresa á "•Qíiieuto. Dñes, Acaso me lllegue mi turno; tudiando sus bellísimas y sublimes can- cargo de diputado, si bien no le fué ad-
continuación de este modo: «No soy yo '>haced memoria de ?ni primo: vuestro amorciones, gozando con sus alegrías y gi- mitila, hasta que volvió á persistir en'
'•el único que ha escrito canciones desde «le prometisteis: y smcubargo, se halla en miendo con sus pesares, se me pasó el ella y después de la tumuítüo.sa manifes-
hr;ce qiiifice ó diez y ocho años. Regis- Viena.« tiempo de manera de rio fijarme en si tación del 15 de Mayu. Je croyalt élre de-
í'irense li-íias las colecciones, y se verá Guerra cotiJiaua y eficaz hiz) á la la travesía fué larga ó corta: algunas de paté d' une Asemblée órageuse, mais non
«corno el ¡lueblu quería que se le hablase restauración bíijo los dos reinados de sus canciones traduje y concebí el pru- pas de une orage assemblén, decía eatonces
«en el tono más grave de sus quebrantos Luis XVIII y de Cárlü,s X, cantando por póoito de entregárselas eu mano propia volviéndose ásu amado retiro.
•>'y de sus esperaizas. Sin duda debe la todos los tonos y formando toda una uu día ú otro. No se me cumplió este do- Gozando uua ¡lopulariJad sin ejemplo,
^costumbre i.le este dia¡)asou- elevado á lengua [wra el puebb, de quién bebía seo hasta cinco años más tarde. Pocas tanto por lo extensa como por lo dura-
»la iijmortal Marsellesa.» las inspiraciones. Por el año dé 1815 dio horas después de luihegadiiá París, du- ble, ha pasado Beranger de esta vida
También esplica satisfactoriamente su á luz el primer tomo de sus cantos; y rante la prlmWí^^a de 1846, supe que el cuando estaba próximo á cumplir seten-
luaueii'. de ver los sucesos y el" rumbo amenázasele con la pérdida dé su modes- afamado cancionero vivía en la calle Du ta y siete años: nacido el 19 de Agosto
que tomaron sus inspiraciones. Su admi- to empleo, si uo (iesistia de publicacio- Faubourg du Roule, cercada la Barre- de 1780, harauertoellG ieJuli) le 18.57.
ración entusiasta por el genio de Napo- nes semejantes. Guardando memoria de ra. Sin otras señis me fui a buscirle, No quiero hablar de sus fuuerales: bás-
león el Grande, y la ídoit-tila con que le la amenaza, el dia en que se puso en seguro de que le encontraría. Cerca de taiu,! dv'cir qu! -,>i han repartido esque-
miraba el puebe.), figurando como repre- venta ei segundo tomo á fines de 1821, la B irrera vi un despacho de tabacos: las de convite para formar parte del
sentante de la igualdad victoriosa, ja- se abstuvo jiara siempre de preseutar- allí entré á pieguatar por el popularísi- cortejo, y que el pueblo solo ha asisti-
más le cegaron sobre el despotismo se en la oficina. Pero hu'jo de compa- mo poeta, y la buena mujer que estaba do como espectador y por" entre filas de*
.siempre creciente del Imperio. En la recer ante los tribunales, y de sufrir una al mostrador no me supo decir más sino soldados á la fúnebre ceremonia, agol-
caida del coloso el año de 1814 no vio prisión no corta en Santa Pelagia La li- que ¡neos días aütes habia ido á com- pándose al trán.-ito del féretro que
más que las desventuras de su patria. bertad es el titulo de la primera canción prar tabaco y la dijo que iban á ser veci- guardaba los restos mortales de su hom-
A la vuelta de los Borbones, quíj le eran que compuso en su encierro; tantos aga- nos muy pronto; pero enterándose de la bre, desde la casa mortuoria, calle d»
indiferentes, ocurrióle que su debilidad .sajos recibía allí de .sus compatriotas, conversación un mozo de blusa que se Vandoma, hasta el cementerio del Padre
habia de facilitar el renacimiento de las que las cauciones denominadas La caza, hallaba á la puerta, se brindó á acompa- LH Chaise, por él camino más corto. Ya
libertades nacionales. Tras el desenlace Mi curación, El agente provocador, fueron ñarme á donde quería, y me coudujo á por el telégrafo se nos habia anunciado
fatal de tan prolijas guerras la opinión dirigidos por muestra de gratitud á los una casa modesta, pero pulcra y bonita que ni aun se habían pronunciado los
del pueblo, de quien jamás se ha separa- que le enviaron caza abundante y exce- como un nacimiento. Experimentando discursos de costumbre en ceremonias de
do, no le pareció decididamente contra- lente vino de Borgoña; allí celebró entu- una sensación inexplicable toqué a la al- esta clase. ¡Francia muda sobre el se-
ria á los soberanos que acaba de desen- siasta el levantamiento de los griegos daba, y .le seguida' oí pasos despaciosos pulcro de su gran caucionero! ¡Que si-
terrar la Europa. Eatonces ensalzó la contra los turcos en la sombra de Ana- cada vez más cérea, y me dio el corazón lencio tan elocuente el de Francia! •
gloria de Francia á la faz de los estran- creoníe y el Pichón meiisagero. Ni las [)ro- que venia a abrirme Beranger en perso- ANTONIO FERRER DEL RIO.
jeros: su canción titulada el Buen francés, mesas, ni las amenazas, ni las persecu- na. Así fué en efecto; como le conocía
fué cantada delante de los ayudantes de ciones, podían lo más leve contra su vi- por su retrato, le dije sin dar lugar á
campo del emperador Uejaudro. goroso temple de alma, y menos aumen- que me hiciera pregunta alguna: LA INDIA INGLESA.
tándosele el favor popular de hora en
Poco duraron las ilusiones: algunos hora, y menos aun siendo su indepen- «A V. es á quien busco; no soy nin-
meses bastaron para que se pudieran dencia tanta, que en la canción escrita «gun comisionista de la fama, y así es- ARTÍCULO I.
conocer todos y para desilusionar á los por entonces con el titulo de Consto de »pero que no me cierre V. su puerta (1).
menos perspicaces. Durante los cien días Lise. rehusó admitir un empleo que le "Soy uu español que le admira y viene á Inglaterra tiene rodeado el mundo con
no se engañó Beranger, á pesar del en- ofrecía su íntimo amigo Laffite en su «rendirle un humilde tributo de afecto uu cinturon de fuertes, colonias y esta-
tusiasmo del pueblo, confirmándose en escritorio por compensación del que en «con algunas canciones suyas traduci- blecimientos, sin contar los vastos terri-
que Napoleón no habia venido al mundo la Universidad había perdido. das al castellano.»—«Mucho siento, me torios continentales que posee. Al echar
para gobernar constitucionalmeute, y «dijo, no poderlas entender como desea- la vista sobre el mapa, el ánimo queda
expuso sus temores en la canción que Cuando Beranger daba á la imprenta «ra, pero no se más lengua que una.«— abforto y la más atrevida imaginación
titula Tratado de política para el uso de Li- sus canciones de tomo en tomo, ya se Y desentendiéndose del elogio, eomo abarca apenas el poderío material que ha
se. Al verificarse, después del tratado de las sabía de memoria toda la Francia. cumplía á su inodestia de siempre, si- nacido del exiguo^núcelo de una peque-
Walerloó, la segunda invasión extran- Donde quiera se cantaban La consagra- guió hablándome de que ni aun sabia la ña y áspera Isla de Europa, situada á la
jera, adquirió el intimo convencimiento ción de Carlos el Simple y el Hombrecillo lenguado Horacio, y que esta Ignoran- entrada del mar del Norte; de uua isla
de que Luis XVIII y los Borbones de su rojo, cayo estribillo es, Santos del paraíso cia habla alegado á sus amigos^ para cuyo porvenir mal adivÍQaron los roma-
rama, aun siendo tales como todavía lo rogad por Carlos X, al tiempo en que se resistir ¿ s u s íavitacíoues de solicitar ün nos considerándola como emporio de la
propalaban sus adictos, no podían regir formó nueva causa al célebre cancionero puesto en la Academia. Nuestra primera barbarie, y que dividieron por ínedio de
á la Francia, ni Francia les podía hacer el año de 1829, saliendo condenado á conversación duró bastante, y me habló una muralla, cual si quisieran marcar
adoptar los principios liberales, que des- diez meses de encierro y á diez mil fran- con acierto sumo sobre las cosas de su con ella el límite de toda civilización po-
de 1814 reconquistaron todo lo que les cos de CEulta; abrióse una suscriciou patria y la C8ia. sible.
habían hecho perder el terror, la anar- para pagarla, mientras cumplía el tiem- Al despedirse del público el año de Curioso é instructivo á la vez sería ir
quía del Directorio y la gloria del Impe- po de su prisión en la Fuerza; todo en 1833 dijo lo siguiente: «En el retiro dón- siguiendo paso á paso ese inmenso des-
rio. Al decir de Beranger, este conoci- vista de la gloriosa revolución de Julio. »de voy á conlSnarme se me agolparán arrollo y estudiándolo simultáneamente
miento debiólo menos á los cálculos de A sus amigos elevados al ministerio dedi- «los recuerdos, como que son la buena en la situación geográfica de la metró-
su razón, que al instinto del pueblo. Es- dicó el insigne poeta una canción nota- «fortuna de un anciano. Nuestra época, poli, eu la misma ingratitud de su suelo,
tudiándole con esmero religioso, casi ble, donde se ve que, tras de arrostrar «agitada por taQtas pasiones extremas, en el carácter de la raza sajona y en la
siempre aguardó á que los sentimientos con notable tesón y osadía los peligros influencia de sus institucioues tradicio-
populares estuviesen en armonía con sus de la lucha, no quiso parte alguna de las nales y consuetudinarias, modificadas
reflexiones propias á fin de trabarse la recompensas de la .victoria.—«Consentid (1) Así me expresé recordando gae en su paulatinamente, pero siempre en el sen-
norma de conducta en el papel que la »(le8 dice) que salga de este palacio: yo «despedid» del publico haW» dicho:—/• aifermé
»ma porte anx eommit voyageunde la reso'- tido de la libertad y del progreso. Re-
había señalado la opinioa de entonces. «debía á vuestras grandezas un saludo. »m¿e, cei gens gui u ehatgent d» eolpolérvelre nunciaremos a esta tarea, sin embargo,
Nada más interesante que seguir á «Adiós, amigos. He dejado mis zuecos y »répuíatíon en province ei jutque don$ le et- porque es muy otra la que nos hemos
Beranger en este diticil y gloriosísimo «mi laúd detrás de la puerta. Bajo estos „tranger.-» propuesto. Ei hecho solo basta para ser

apreciado como lección elocuente y pro-
vechosa enseñanza.
La Inglaterra cuenta actualmente,
ademas de sus posesiones de tierra firme
en la América del Norte y en la Penínsu-
la indiana, las islas de la Maucha, el is-
lote y fuertb de Holigoland en el Báltico.
Gibrultar en España, Malta en el Medi-
terráneo, las islas Jónicas en el archipié-
lago griego, Aden á la desombocadui-a
del golfo Arábigo, Sierra Leona y el Ca-
bo en la costa de África, y á corta dis-
tancia las islas de la Ascensión y Santa
Elena; la isla Mauricio y Ceylan en el
Océano índico, Singapore y Hong-Kong
en el mar de la China, la nueva Gales
del Sur y la tierra de Van-Diemen en la
Australia, la nueva Zelanda entre el Pa-
cifico y el mar glacial, las Marquesas en
el grande Océano, las islas Falkland junto
al cabo de Hornos, la Guyana en la Amé-
rica Central, la Jamaica, las Barbadas,
las islas de Sotavento y algunas más en
el mar de las Antillas, las Bermudas en
en el Atlántico, Halifax, el cabo Bretón
y Terra-Nova en la América del Norte, y
otras varias olvidadas quizás por nuestra
memoria, que no puede menos de ser in-
fiel bajo el peso abrumador de tamaña
nomenclatura.
Este vastísimo imperio, aunque hete-
rogéneo por su propia naturaleza, lejos
de ser deleznable como el que formaron
Alejandro ó Garlo-Magno, va ensan-
chándose de día en dia, porque no es el
resultado del valor ó de la fortuna de un
hombre, sino de la fuerza duradera de
un sistema político desenvuelto con per-
severancia é incrustado, digámoslo asi,
enla organización de la sociedad inglesa.
Toris y Wiiigs se hausucedido eu el go-
bierno: la dinastía de los Estuardos, des-
tronada en los tiempos modemos á im-
pulao de dos revoluciones, ha sido reem-
plazada por otras; reyes|ineptijs se han
ceñido la triple corona de la Gran-Breta-
ña; gr&ndes guerras y grandesca[)itanes
han amenazado su existencia mercantil;
fiu Tesoro, su Banco y sus comj)añia3 de
comercio se han visto al borde de una
bancarrota. Y no obstante esto, la Ingla-
terra atravesó por entre todos los conflic-
tos y peripecias con rumbo seguro é
invariable, aprovecháuduse hasta sie .oas
desgracias, no de otro modo que un ba-
que dirigido por hábil piloto surca ma-
gestuosu los mares, impelido por el vien-
to y las olas que se levantan para des-
truirlo.
A tíinla prosperidad, á tal grado de
influencia no llegan siempre las naciones
por medios irreprochables, ni menos las
gozan sin suscitar la envidia, la censura
y los resentimientos. Así es que á la mo
deraa Cartago se la acusa, como á la an-
tigua, (le su falta de fe y de sentimiento,
de í-u hidrópica codicia y de su ambición
ilimitada. Hasta qué punto sean justos
6stos cargos, no nos toca á nosotros de-
cirlo. Observamos únicamente que no
existe,un pueblo que eu su buena for-
tuna no haya sido objeto de ellos y
los reconccemos por hijos legítimos de
los que se formulaban antes contra la
dominación española y portuguesa en
las indias por los mismos que luego hau
sido nuestros serviles imitadi^res. Es di-
fícil, ya que no imposible, que las poten-
cias de brillante historia se conformen
Con su inferioridad y se presten á reco-
nocer sin empacho que siguiendo un sis-
tema opue.-to al suyo se consigue idén-
ticos ó más sólidos resultados. Üe-aquí
Dada la especie de desdén con que se
habla de esos mercaderes ingleses sin
tomar en cuenta que esos mercaderes
disponen á su antojo de la mitad del
globo.
Los émulos de la soberbia Albion em-
plean otro recurso, el de predecirla su
próxima ruina, iniciada en sus entrañas
por el aumento del pauperismo y por la
«xhuberancia de su fabricación, y pre-
sentida en el esterior por movimientos
insurreccionales como el que estalló en
ia India. No cegaremos nosotros la gra-
vedad de estos dos síntomas pero es-
tamos distantes de deducir consecuen-
cias tan próximas y funestas como las
SBCan riel apasionado análisis de los
^lementos disolventes de la Gran-Breta-
ña, en el que suelen dejarse á un lado
^^s grandes elementos de conservación
y resistencia. Sea esto lo que quiera;
Preséntense las complicaciones de la In-
dia como el principio de un ñn ó como
nn 8imi le accidente, hemos ceido opor-
tuno aprovechar la curiosidad que aque-
•ilos sucesos escitan, para dar una idea
CRÓNICA HISPANO-AMERICANA.
siquiera superficial, de esa celebre con-
quista, de sus ventajas é inconvenientes
y de los resortes interiores con que se
sostiene y Jse agranda. De esta manera
nuestros lectores estaránen disposición
de juzgarpor su propio criterio acerca de
las eventualidades del conflicto, de sus
causas y d e sus efectos, y nosotros nos
ahorraremos el poco envidiable papel de
profetas en una é,ioca tan ocasionada á
errores y equivocaciones, aun para los
entendimientos más perspicaces, por lo
multiplicado y complejo de los aconteci-
mientos.
Sabido es que cuando la caprichosa
fortuna soüreia á la Península Ibérica,
Portugal y Castilla realizaron las dos
empresas más colosales que mencionan
los anales de la humanidad, y que á no
haber ocurrido hace tres siglos y tener
de ellas comprobantes á montones, diría-
se que eran una pura fábula ó un mito.
Con escasos años de intervalo llegaron
estas dos naciones á las indias Occiden-
tales y Orientales, 'lirigidas primero por
el genio y el mag:.ánimo corazón de sus
avKutureros. Hubu,8in embargo, una di-
ferencia que no debe perderse de vista
porque esplica la diversidad de obstácu-
los que unos y otros encontraron y ven-
cieron: Vasco de Gama no descubrió
más que un camino, mientras que Cris-
tóbal Colon descubrió un nuevo mundo.
Los portugueses se hallaron con una ci-
vilización, resto degenerado de la anti-
gua, pero que no por eso dejaba de ser
comparativamente adelantada y además
tuvieron que luchar con la raza mahome-
tana, prejionderante en ciertas comar-
cas, con la fuerte oposición délos turcos
que explotaban desde Egipto el tránsito
del comercio indiano y con la mala vo-
luntad de los venecianos que disfruta-
ban el monopolio de trasportar por mar
las mercancías. Euro()a no había perdi-
do enteramente el recuerdo del inmenso
continente oriental desde la mitológica
espedicion de Baco hasta los viajes de
Marco Polo. De allí habia recibido cons-
tantemente las especies, los ricos y finos
tejidos, las perlas y piedras preciosas; y
allí precisamente era donde tratábamos
de ir por el Occidente, cuando un feliz
estraví') de cálculo no? hiz) tropezar con
la América. Asi es que Ahneida, Albur-
qnerque, Juan de Castro y demás cu pira-
nes que Portug-al envió suce.-ivamente,
no tanto se vieron contrariados por la
Índole de los verdaderos in.ligenas, como
por las coaliciones formadas entre algu-
nos príncipes, Venecia y Egipto. A pe-
sar de todo triunfó el deuuedo* lusitano,
y á los 60 años de comenzada la ocupa-
ción, después de correrías y descubri-
mientos sin número, se estendirtn los
nuevos dominadores á lo largo de las
fronteras de Pérsia y del mar de ia In-
dia, por las costas del Malabar y Coro-
mandel, por el golf) de Bengala y la
Península de Malaca, recibiendo tributo
y obediencia de la isla de C-ylan, de la
de la Sonda y las Molucas, y teniendo
abierto á sus buques el t.-áüco lib e en el
Japón y en la China. En todas [«artes
poseían establecimientos y entraban ca-
si esclusivamente en sus depósitos para
venderlos á la Europa, el aloe de Socoto
ra, las perlas de Ormuz, la canela y los
rubíes de Ceylan, si sacedan y alcanfor
de Sunatra, el clavo y la nuez moscada
de los Molucas, la pimienta de Goa, re-
sidencia del virey y sede de las colonias,
las mu.selínasde Bengala, el algodón y
el azúcar de la India la porcelana dei
Japón y el té de la China.
¡Perocuántos esfuerzos,cuántas pérdi-
das, cuánta constancia fué preciso prodi-
gar para obtener semejantes resultados!
Sitios . e plazas bien fortificadas; bata-
llas campales en que no se preleuba con
flechas de punta de hueso ó de esjtina,
sino con fusiles y cañones;combates un
vales, para los que se trasportaron á lo-
mo buques europeos á través d, 1 I^tmo
de Suez; un clima mortífero; la diseini-
uaciüu de fuerzas qu^seconsiguiente á
una empresa tan Vasta; la suspicacia de U
corte de Lisboa, las rivalidades intesti-
nas; todo esto se opuso al indomable va-
lor de los portugueses, y t ,do en vaim.
FraiiCisco AlmeiUa derroiú al Z..m'.iiiio
deCíilcuta, á quien auxiliaban lus vene
cíanos. Alburquerque se apoderó á viv»
fuerza de Malaca, centro del cómercu/
interior; penetró eu Ormuz, emporio del
comercio esterior, y batió á la escua
dra egipcia; y Juan de Castro venció
en 1538 á un ejército turco llevando ya
bajo su bandera al rey de Codieu y sus
tropas. Estas guerras sangrientas no
les impidieron fundar establecimientos,
prestar socorros & los chinos y recabar
de los indígenas, más por la afta idea de
poder que sus proezas les habían gana-
do, que por amistad y cariño, la sumi-
sión y el respeto en todos los pueblos,
en todas las razas y en todas la civiliza-
ciones que existían desde el Japón hasta
el Cabo de Buena-Esperanza.
Las riquezas del país mas fértil del
globo debia influir eu las costumbres de
los conquistadores, que lejos desupatria,
y tal vez sin esperanzas de volverla á
ver, buscaban en los goces del lujo y en
los deleites una compeusacion á tan sen-
sible (lérdida. Cada uno de aquellos rudos
soldados se convirtió en un príncipe, cu-
bierto de piedras preciosas y de seda,
haciendo por su cuenta el comercio y su-
pliendo el déficit entre sus ingresos legí-
timos y sus gastos con impuestos y
exacciones que llevaban el disgusto y la
perturbación á las familias indias. Nia-
gun monarca de Europa hubiera podido
competir entonces con la ostentación de
nn virey portugués, rodeado de guar-
dias y de todo el servil aparato de la eti-
queta oriental, habitando magníficos pa-
laci s, gastando enormes sumas en su
mesa y en su servidumbre y ahorrando
lo bastante para vivir en su patria como
un potentado..
Hubo, no obstante, honrosas escepcío-
nes y desintereses tan heroicos que cues-
ta trabajo creerlos. Cuéntase entre otros
el del virey Juaq de Castro que contra-
tando un empréstito para las fortifica-
ciones de Diú, que acababa de asaltar,
tuvo que dar en garantía sus bigotes, y
dejó por único capital á su muerte tres
reales de plata.
Nuestros lectores nos dispensarán esta
dio^resioo en gracia del asunto, ¡Cómo
pasar de largo por la ocupación de la
India, gloria gemela de la nuestra de
América sin detenerse un momento é
contemplar la pléyada de héroes que la
realizaron! ¡Cómo no admirar tanto de-
nuedo en unos hombres amenazados de
peligros p r todas partes, privados fre-
cuentemente de auxilios y distantes mi-
les de 1 ^guas de la metrópoli! La Penín-
sula Ibérica habia i:iCubado en su larga
lucha con la media luna tal savia, tal
nocijsidad de acciou, tal deseo de enaau-
che, que rotos los diques que la retenían
comprimida eo el círculo estrecho de su
periferia, fué, al salvarlos, un verdadero
torrente. Francia, Italia, Holanda, Ale-
mania, eran corto espacio á su actividad
guerrera, y si no hubiera encontrado
para aplacarla la dominación de las dos
Indias, no habría sido acaso un sueño
la idea de Carlos V. ¡Qué comunidad de
destinos los de España y Portugal! En la
misma época, bajo los mismos auspicios
y con la misma incertidurabre, el g'énio
aventurero del uno le conduce á Levan-
te y el de la otra al Poniente, como sí
quisieran, reuniéndose luego, estrechaj
al mundo entre lus robustos brazos.
Iguales haziñas, igual energía, igual
tenacidad en ambos; igual asombro,
igual respeto, igual envidia en la Euró-
[)a que los contemplaba. La conquista de
los [)ortugueses no tendría ejemplo en la
historia, si la historia no consignase
también la conquista de los españoles;
y á los nombres de Vasco de Gama, de
Diaz, de Albunjuerqu^, de Ahneida y de
Juan de Castro no habría nombres que
oponer, si no hubieran exi-tido Colon,
El Cano, Cortés, Bilboa, Almagro y Al-
varado. Para que la identidad sea mas
aboluta, tocando ya en los límites del
misterio, un soldado poeta, Camoens,
cantó el principio de la epopeya lusitana
en las Limadas: y otro soldado poeta,
Ercilla, Cantó un episodio de la epopeya
castellana en l& Araucana. ¿Noera la Pro-
videncia la que trazaba el rumbo á estos
dos pueblos, separados por la política,
para fundirlos en uno solo, haciéndolos
ai.-ladamente grandes para que fuesen
juntos omnipotentes? Y sin embargo,
icosa rara! la violenta incorporación de
i^ortugal a Castilla inició la decadencia
de la Península, y fue para el primero
ChUsa eficazde sus pérdidas en las Indias
Orientales.
Eljirotestantismo habia declarado {la
guerra á Felipe II y decidido atacarle en
todas partes. La Holanda y la Inglater-
ra, ésta más modestamente que aquella,
fijaron sus ojos en la nueva conquista
qu.- acababa de pasar, como hemos indi-
cado, á la corona de E-paña. Inmediata-
mente las siguieron, aunque ninguna
lí'
con tanto éxito, la Francia, la Dinamar-
ca, el Austria y hasta la Prusia. Peror'
conio no es nue.stro ánimo-referir las l u - '
phas que allí tuvieron Idgar, sino err'
cuanto se refiera á la prepíonderancia de
la Gran-Bretaña, nos limitaremos ¿ d e -
cir que las Provincias-Unidas redüj[é-í
ron mucho el territorio de Portugal, que
Batavia prosperó más que G«a, que sus
relaciones comerciales y sus tratados W
estendieron á todos loa pantos que es-^
plotaban antes esclusivamente los pqr->
tugüeses, y que la toma del Cabo de
Buena Esperanza las hizo dueñas de una
de las llaves de la India.
El apresamiento de algunos galeones
verificado por los capitanes Stpheus,
Drak y Cavendish, sugirió á la Gran
Bretaña la primera idea de comercio eu
el Orí ^nte, y á este efecto la reina Isabel
otorgó en el año de 1600 un privilegio
para traficar más allá del Cabo á una
compañía formada bajo el capital de siete
millones de reales dividido en acciones
de 5.000 cada una; modestísimo nací-'
miento de la graa compañía de las lu-
dias. El primer gobernador nombrado
por la coronafué Tomás Smith. En 1655,
durante la dictadura de CronWíl, se de-
rogó este privilegio, restablecido después
á los tres años y perpetuado más torda
hasta 1689; pero ya en la época de la
suspensión un tratado de amistad cele-
brado entre la Inglaterra y el Gran Mo-
gol en 1632, habia permitido á la asocia-
ción mercantil formar establecimientos
en Sumatra, Java, Borneo, Formosa, Co-
chinchina, Chusan, Macao y China.
Imperaba á la sazón Aureg-Zeib co-
mo príncipe independiente. A despecho
de los holandeses y de los portug^ueses,
las factorías británicas se abrieron una
entradajen el Indostan, donde su benevo-
lencia con los naturales y su maquiave-
lismo en sacar partido del odio que se
iba desarrollando contra los extranjeros,
les habían creado una posición segura
mucho antes d"e que el apoyo prestado al
Shah-.\bkar les autorizase á construir
en 1568 el fuerte de San Jorge, origen
y base de Madras.
La formación de una nueva compañía
que compró su concesión por medio de
un préstamo al gobierno de Londres, y é,
la cual, trascurridos algunos afus, se
reunió la primitiva, comunicó nueva vida
y poderoso imjiulso á la ambición ingle-
sa, herida en su amor propio y en sus
instintos de lucro al ver cómo se dispu-
taban las demás potencias de Europa
aquellas fértiles comarcas. En 1753, sin
.- mbargo , flo eciente ya su comercio,
habia adelantado poco en la ocupación,
limitándose sus posesiones territoriales
y su soberanía á treinta y siete aldeas,
ó mejor dicho, fuertes concedidos por la
corte de Delhi, y entre los cuales se cam
taba la hoy rica y populosa Calcuta. Las
rivalidades intestinas, la luetia empren-
dida entre la Fraucia y la Inglaterra,
cuyo principal teatro fué la ludia, y la
violación de la capitulación de Madras
que habia caído eu poder de Dapleix,
gobernador de Pondichery, no solo in-
di^jeron á la compañía el m )tívo ó el
pretesto de los armamentos y espedicio-
nes militares, sino qud le enseñaron el
sistema de intervención en las contieudaa
de los principes indígenas para irlos
reemplazando y desposeyendo sucesiva ^
mente; resorte principal de la política
inglesa que todavía funciona con el me-
jor éxito, y que á pesar de su repugnan-
te inmoralidad no subleva la conciencia
de los puritanos isleños. De esa fecha
datan las adquisiciones importantes. El
coronel Olive batió á las tropas francesas
y á las del país coaligadas, apoderán-
dose de Beuirala, Bahar y Onsia, y en
tiempo de Warren Hastings perdió la
Francia todas sus posesiones de resultas
de una guerra que gravó la deuda bri-
tánica con 900.000 libras esterlinas, pero
que asentó su preponderancia en las
costas del Malabar y de Coromaudel y
en los golfos Pérsico y Arábigo. Una vez
abatido el poder colonial europeo ó r e -
ducido á exiguas y nada temibles pro-
porciones, cada año fué una conquista,
un pacto leonino, una alianza producti-
va ó una herencia forzosa, que dejaba en
las ávidas manos de la Gran-Bretaña por
el intermedio de la compañía unos cuan-
tos miles de leguas cuadradas y unos
cuantos millones de subditos. TipooSaeb,
sultán de Mysore y uno de los soberanos
más poderosos y valientes, cayó bajo las
ruinas de su capital en 1799; la confede-
ración de loa maratas, que ocupaba una
 14. LA AMERICA.-ANO XVII.—NÜM.-8.°

estep^ion de 900 a)^W ."Je ,líorte á Sur j do ^on fervoroso celo 1» proposición del cándalo. Varios , de Ips censurados;..88 subvención de 187.000 hbra^ esterlinas.
P9i:; otra otíü, igual,' dej E^te ¿ Oesite, iréy J u a u 4 s Portugal [)ara propagar la presentaron en fíonia,' pero lejos dé ,vá- Dirigen tres clases de establecimiehtos,..
quedó disueltá y sometida-, arrostrando fe, por. sus nuevas posesiones, y se dió á riar de conducta á suyuefta, supusieron, ,á saber: polegios,para "eridioma inglésry
e ¿ s ü caída al,ladostaa projaiamente di- la vela para la India, de que habia de ser que el Pana les,había concedido permiso las ciencias modernas; hospicios en qiie,.
Cüo, vastísima'coóáarcá eii cuyas costas, llaoíadb andando los años apóstol y pa- para enjpléarsus .priñjeras prácticas, y , se recogen los huérfanos y desvalidos, y!"
se alzan las ciildádes úiá^ conaerciáles trono, en jcompañía del virey Martin de contiiiuaróD: usándolas hasta, que dUlran- esGueJas primarias en que se enseña. 4(
y'cuya antigua .capital.l).óíjii h'á sido el Bo_^á y de otros sacerdotes dé la orden.: te la guerra, eptré los .fíanceses y los in-, ¡leer y á escribir énla léi^ua Vulga? d d
foco de la insufreCdoá' da los cipáyos. plim^, .crueldades, indiferencia, peligros, ;gleses, estQs clescubrí,eronJa. í^upj^clxeria' país.. De esto nos ocuparemos más, detíi-|
En Jft tribuna inglesa fe levíuitaba de bada le arredró en su santa tarea: su fe á los iñdigeuas.qué cayeron al matante lladamenté cuando tratemos de la i^-.
yaz en cuando una yoa par» protestar no se entibió, su constancia po conoció en su anterior idolatría. Lá reacción fué. ¡truccion pública. ' '•
contra semejaiute sistema de engrande- él desaliento, y los raudales de su cari- tan general, que cuHUta el p;^dra,l)gibois', i De esta sucinta reseña sé despréndela
cimiento, y los gobernadores enviados á dad parecian inagotables. Antes de em- ¡á ñnes del siglo .xvui, qué eii el periodo jesoasa influencia q ue ha ejeréido la Reli-
1^ India solian llevar pacíficas instruc- pezar á desvanecer los errores de un fe- de 25 años 1^0 habia encoutradq un ver-, gión en la ocupación de las posesiones.
cipijes; pero, siempre ocurría aígua su- tichisnto repugnante que había sustitui- dadero cristiano. inglesas. La protestante, especialmeti-
ceso que venia á desvirtuarlas, un tri- do á la rélig-ion de B^acma y á lá refor- Tras de los njisionerps católicos se te, frja en ÍSUS dogmas, austera 'en su,
buto negado, una mediación entre dos ma budista; antes de disputar con sus presentaron los catequistas evangélicos, culto,'se adapta mal á la exhuberante
disidencias, una ameuáza ó uu peligro; infatuados doctores; antes de hacer pe- y abriéndoles eí camino en. 1705 el doc- imaginación de aquel pueblo que busca
y la conquista volvía á emprenderse, y netrar en la ruda inteligencia de las Cla- tor Ziegénbolg, protegido por Federi- :impenetrables mistários, que tiene' teo-^
l|ábia nuevos príncipes despojados y ses inferiores las verdades del Evange- co IV, rey, de Dinamarca. Cincuenta gonías complicadas, y que cuenta el
nuevas cesiones estipuladas. Así sucum- lio, tuvieron que dedicarse los misione- años, después las sociedades bíblicas in- tiempo por miles de millones de años. Si
bió también el imperio de los Birmaiíes ros, y especialmente su jefe, á morige- glesas comenzaron á ocuparse de los á esto se agregan los obstáculos puestos
dur^ntfe pl mandó de lord Amherst, como rar las relajadas costumbres de sus com- asuntos religiosos de Ija India, que ha- por la compañía al desarrolló'de la pre-
líábia aucumbido la coáíéderacion á los patriotas. Conseguido esto, más que con bían estado completamente abandonados dicación y de la enseñanza, y el carácter
Refuerzos del coronel Wellesley, ensan- la fuerza del raciocinio con la autoridad por la política de los gobernadores y de poco atractivo ds la propaganda de laS
cbando las fronteras de la dominación . dSi ejemplo, todos los esfuerzos se diri- la compañía, opuesta a la propaganda y sectas disidentes, no es de estrañar los
británica basta el Thibet y la Cbina. La gieron al catequismo de los infieles, des- sostenedora decisiva de los antiguos cul- insignificantes resultados obtenidos has-
^az^ belicosa de los seikus, aguerrida ; plegatido en esta obra meritoria Fran- tos y de las antiguas ciencias. Así es ta el presente en un país que habían:
además por oficiales «uropeos, imploró cisco Javier tal unción, piedad y celo, que lord Olive se liniitó á protejer una preparado á la fe las misiones católicas.
el funesto'.auxilio de la Inglaterra, y á que los asombrosos resultados de su pre- escuela fundada en Calcuta por el doctor El indiferentismo del gobierno en una
pocos años de la derrota de Jos afghanes dicación se consideraron por propios y ex- Kiernander para enseñar á los indios de materia, cuya importancia civilizadora
(1839), se incorporó el Siud á las pose- traños como milagrosos. todas las sectas los principios 4el cris- nadie desconoce, llevado á la exagera-
siones británicas (1842), por el mismo Quince meses vivió con los salvajes tianismo y las bases de la éduCacion ción que hemos visto, no puede defen-
lord EUenborougb que iiabia desaproba- del Malabar, de quienes fué á la par juez, europea. Aun esto pareció demasiado al derse en manera alguna, ni aun como
do la política agresiva de su antecesor médico y maestro; en el reino de Tra- indiferentismo oficial erigido en sistema, cuestión de puro egoísmo para los domi-
lord Aukland. Por fin traspuesto el ludo, Vancore bautizó en un mes á diez mil y cuando á la renovación del bilí de pri- nadores.
fué tomado Kabul, y ocupados el Peud- idólatras; mandó traducir á los dialeqtos vilegio en 1799 pidió Wilberforce que so La casta, que es el fundamento de la
íab, Cachemira, Nazara y Herat, y no indígenas el símbolo y las oraciones ca- obligase á la honorable compañía á que sociedad india, se opone radicalmente al
sabemos si ahora ge detendrá el astuto tólicas, y salvando todo»género de con- mantuviese misioneros, la moción fué progreso moral y material, y es preciso
leopardo ante las complicacioues inte- trariedades, después de haber estendido desechada por una considerable mayo- combatirla prudentemente, infiltrando
riores ó ante la actitud de la Rusia que lá religión por varias islas, entre ellas ría. Las asociaciones filantrópicas no en los ánimos la idea de la igualdad cris-
le sale al paso oculta detrás de la Persia. por el Japón, donde permaneció dos desmayaron con este descalabro, y en tiana y de la caridad evangélica, y le-
Además délos gobernadores que hemos año.^j consecutivos, murió enfrente de las tiempo del marqués de Wellesley c jnsi-' vantando de su postración á aquellas r a -
citado, han contribuido á este prodigio- costas de China, á la que se proponía lle- guierou que se destribuyesen en aque- zas condenadas á una perpetua servi-
so ensanche el marqués de Wellesley, var la propaganda. llos dominios sus tradieciones bíblicas. dumbre. Así se ha empezado á hacer de
lord Cornwallis, lord Minto, lord Nas- LoS'jesuitas enviados desde Portugal Desde entonces en malayo y en chino se diez años á esta parte.
tiiigs, lordHardingeyel coronel Burnes, áCioa, que contaba á poco 300.000 cris- han impreso cuatro mil obras de doctri- Para ello debe apelarse al sentimiento
poniendo cada cual su piedra en esa in- tianos nuiívos, adquirieron tal fama en- na cristiana, que forman más de 700.000 más bien que á la inteligencia, porque
jnensa mole empezada á levantar sobre señando, que penetró en el Coutnieute y volúmenes, con destiuo á Malaca, Can- en los pueblos primitivos y de mengua^
el pliego dd papel de un privilegio otor- humilló el orgullo de los príncipes, y lo tan, Batavia, Penang y Singapour, sin da ilustración se abre el alma mejor al
gado á una sociedad de traficantes. que es más raro, el de los sabios india- contar las que se han introducido en el contacto del hombre quo al cotitacto del
libro. Pero en esta clase de preparación
El imperio ludo-británico se e.stiende nos. Abrazando algunos el cristianismo, Indostan y en otros puntos, que do se- el prostantismo inglés, con su gravedad
en la acluallaa i de O. á E desde los paí- el valgo, acostumbrado á venerarlos, si- guro ascienden amillones de ejemplares.
ses limítrofes á la Pérsia hasta los inme- guió inmediatamente su ejemplo y au- El respeto de la compañía hacia los y con su confort, irá siempre muy en za-
mentó de una manera considerable el cultos primitivos llegó en la ludia á tal ga á la predicación católica. Uu lutera-
diuos á la China, y delS. al N. desde el número do los catecúmenos, aunque bajo no, un calvinista, un qtiákero, gastará
mar de las ludias bástalas montañas del no sólidos fundamentos. El Gran Mogol extremo, que se prohibió un folleto en sumas crecidas en la impresión y distri-
Thibet. Compréndese dentro de estas an- Ahkar pidió Biblias traducidas al áraOe que se refutaban los errores del islamis- bución de obras; asistirá á hs medingi
chísimas fronteras una superñcie pobla- y al persa, permitió que se celebrasen mo, y se pusieron bajo uno, protección en que se agite una reforma en el senti-
da con 140 millones de habitantes, que con solemnidad en Labore las fieítas de enérgica y eficaz las más ridiculas cere- do de sus creencias, convertirá su cuar-
hablan 14 idiomas diferentes. Divídese la Natividad de Jesucristo, y después de monias, queá veces uodejabaudaserpro- to en escuela y su sillón en cátedra; pero
en cuatro grandes departamentos que su muerte recibieron el bautismo tres in- ductivas para el gobierno. Citaremos un jamás desplegará el celo personal ni
son la presidencia de Bengala de lü5.44;í dividuos de la familia imperial, á cuyo ejemplo. A fin de cobrar un préstamo participará de la fe ardiente de nuestros
millas cuadradas, con una población de amparo se fundó en Agrá un colegio de adelantado al templo Faggernanth, que misioneros, de esos heroicos soldados
40 millones de habitantes, la subpresi- jesuítas donde hacían su noviciado los es para los indios lo que la Meca para los á quienes retrata Chateaubriand tan elo-
deneia ae las provincias N. O. con un naturales. musulmanes, impuso la administración cuentemente.
territorio de 71985 millas cuadradas y un derecho módico á cada peregrino que
AOGUSTO ULLOA
23.200.000 individuos; la presidencia de Por aquella época presenció Europa un visitase el santuario, cuya entrada no se
Madras que ocupa 145.000 millas cua- acontecimiento extraño: la embajada de franqueaba si antes no recibía del em-
dradas y sostiene una población de los peyes de Buugo y Arima y del prín- pleado inglés, colocado á la puerta, una Pildoras HoHwiy.—Las leyos vilalea. -Hoy
22.000.000; y por último, la presidencia cipe de Omura al Santo Padre. Agasaja- papeleta redactada en los siguientes tér- hay gran necesiilaii da que llainníiias l3 aien-
¿e Bombay con 120.065 millas cuadra- dos y visitados primero por Felipe II en minos: «F... habitante del dist.nto de.... cioa del [lúbiico sobre diversas circunsUncias
das y 11.'109.067 habitantes. El resto Lisboa, atravesaron España é Italia para está autorizado para practicar las cere- de que depende la manuleneion de lasalad.
Uaa de ellas coQsisie en la expulsión del «isie-
hasta el t.jtal de los 140 millones, perte- llegar á Roma entra el asombro y los monias de costumbre bajo la dirección
ma de cualquier impureza eü el moineoío en
nece á los paises tributarios. Las ciuda- plácemes de nuestros abuelos. Grego- de... en los dias... Se le franqueará la en- que so descubra su exisiencia, y otra es la de
des máí importantes de las costas son rio XIII les acogió con gran pompa en trada del templo de Faggernanth; y al que el cuerpo sea forialeciJo cuaslaatementc
Bombay con 230.000 almas. Madras con pleno Consistorio, y su sucesor Sixto V espirar el término prefijado se devolverá coualimoDlosDUlriiivos, ios cuales, uua vez biqn
700.000 y Calcuta, sede del gobierno su- le.s dió la comunión por su mano, cou- al gobierno este permiso.» La autoridad digeridos, mejoran la calidad de la sangre. Para
iremo, con 800.000. En el interior ^e ha- ceJióudoles el alto honor de llevar el pa- pública presidia las fiestas, las anunciaba acelerar el logro de los objetos ¡irecelenie-
f lan Dacca, Benarés, Agrá, Delhi y La- lio y la brida de su hacanea en las fun- con salvas de artillería, y mostraba en meule üiencionados ningún mciiO hay lan eficaz
bore, que fig-uran entre las mayores 'du- ciones de la coronación y condecorándo- todas ocasiones una estudiada deferencia Cuino el uso de las pfldoras ur¡(icante& ds ü o -
dades del mundo. los además con la espuela de oro. respecto de las preocupaciones que más lloway, cuyas virlarles alterau'vas hacen que
Falsificariamos la historiasiá las con- podían halwgar los instintos del vulgo. seáiQ sioguiarmenie á propásiio para ello. Ade-
Cuando los franceses fueron á la l u - El ídolo de Faggernanth, de esta mane- más , dicho medicamenio posee jla propiedad
quistas de Oriente que hemos trazado á dia, los jesuítas de su nación continua- especial de foriificar los nervios y regularizar la
grandes rasgos, y con particularidad á ron la tarea iniciada por los españoles y ra considerado, conservaba su regia ser - eirculaciou, por cuyos medios bOii arregladas la
las primeras, no les atribuyé.semos otro portugueses, instituyendo la célebre mi- vidumbre, y tenia criados adocenas, ca- secreciüQ y la excreción- Estas excelenies píl-
móvil que el estímulo de la codicia. Har- sión de Madura, al [laso que el gobierno mareros, lampareros, guardias noctur- I doraü manu'euen tan perfectameute el buen 6c-
to ha entrado- este vicio en la mayor dividia titularmente el Asia Oriental en nos, criadosi cocineros, marmitones, I den relativo de todas las funciones namralfS
parte de las empresas humanas y no tres iglesias episcopales. Un caballero porta-abanicos, porta-sombrillas, y so- ! que evitan 6 pronto rcmuevec los dolores de
pueden esceptuar.'ie de la regla las aco- nombrado Roberto de Nobilibus, hombre bre todo, numerosas y alegres bayaderas It cabeza, ¡as náuseas, los aiaqjes de bilis, las
fiebres, la diarrea, la uisent ría y otras enfer-
metidas eii el siglo XVI, pero no ha sido tan atrevido como político profundo é in- que los bracmiuas elegían entre las jóve-
medades samejantes.
tan absoluto que no haya dejado lugar á dividuo de la Compañía de Jesús, cono- nes más hermosas y más dispuestas para
un sentimiento más puro, (xtraviado á ció al momento que los únicos senti- el arte coreográfico.
Agua circariana.—Toda la prensa extran-
veces en sus exigencias, p TO intachable mientos vivos en los indios eran sus pre- Semejante conciencia oficial con las jera y iodos los méjicos más eininectes reco-
en su objeto, y al cual es decidora la ci- ocupaciones religiosas; y aprovechando saturnales de la idolatría indignaba á las miendan el uso del agua circasiana como la úni-
vilización moderna de sus adelantos más esta observación, trató de convertirla en sectas puritanas de la Gran- Bretaña y ca infalible para devolver á los caballos blancos
beneficio.-'OS. Hablamos del sentimiento provecho de su idea, y se hizo pasar por tanto trabajaron la opinión en la metró- su primitivo color y fuerza juvenil: copianaos la
religioso, compañero inseparable de nues- un bracmiua reformador, encargado de poli que por el año de 1838, el consejo de opinión de un célebre doctor & c&ie respecto.
tras antiguas glorias en ambas' Indias, devolver su primitiva purezaá las creen- directores determinó que no se tributa- «Uno de los mayores inconvenientes que hay
que va perdiendo su influjo cosmopolita cias populares. Los jesuítas de Madura sen honores militares á los ídoJos, que no en el empleo de las lioluras, es la grande irri-
á medida que el comercio se hace pre- adoptaron entonces el vestido, las cos- so cobrasen derechos á los peregrinos, dan lacion qup causan en los tubos capilares y que
lugar á la caida del cabello: estos inconve-
ponderante. tumbres, el lenguaje y las privaciones que no se pusiesen en cabeza de los do- nienles fueron los primeros que llamaron 1»
Ya al poco tiempo de doblarse el Cabo de los sacerdotes de Bracma. y ocultan- cumentos públicotj loa nombres de los atención de los inventores del agua circasiana, S
acompañaban á los navegantes varios do como uu secreto de vida ó muerte su dioses del Olimpo de Braema, y que los tu vieron la grande fortuna de hallar ua preps'
frailes de San Francisco que arrojaron origen y su fe, consiguieron incalcula- tribunales i o exigiesen el juramento por rado que, no solo es completamente inofensivo,
sino que reúne la mayor eficacia y simplicidad eo
por la/j islas de África y del Océano índi- bles resultadas con su peligrosa impos- el Coran y el Ganges á los mahometa-
su uso.»—Firmado, Dr. Duval.
co semillas de la doctrina cristiana, ha- tura, á pesar de las bulas y amenazas de nos y á los indios.
lladas luego en estado de florescencia por excomunión de la Santa Sede y de su le- Hoy las misioues protestantes se com-
las misiones delosjeauitas. Organizó es- gado adlatere el cardenal de Tournon, ponen de 853 individuos, 360 europeos, Madrid: 1873.—Imprenta de LA AMÍRIGA,
tas el español Francisco Javier, amigo y patriarca de Antioquía, que se habia in- y 493 naturales, que reciben de las di- i cargo de José Cayetano Conde-
discípulo de Ignacio deLoyola, acogien- dignado en presencia de semejante es- versas asociaciones á queperteneceu una san Marcos, Zi, Vajó,
 CRÓNICA' fiísp ANO-AMERICANA. 1$

I.^FALIBL^' iVNTIllKUMATICO.
DE
Kl aceite du beüitíscon sáTia de coco cnra admirablemente' «1 reif- •4
matismo, arti ularó mu.«cuiar, iucijií-nte ó ciónlco, mss pronto, cónn)-
damente y barato quf.las aanas -le Altiima de Aragón, y (ju* to la la O
cias« de tertnas c noei ¡as, «jire los bañoJ lUsos, qns lus especiflcoj mJe Q
aniincii la prensí, precjntoii líis tá niicopeas j memo andun.-imeiU-'
eos de todos los rsisea de la tierra, descubierto en los 5H7d anos <J<Je
' r e g i s t a lahijtoríadéi mundo. '
E íá recomendjdo por médicos alópatas, homeópatas, farmacéopco?,
tí
CQ
M
Mi
J=

y p o r m a s d e S > penójico;, líe todosmatl.esy países d« ambosliéiüis-

o?; V ' PORES-CORREOS DEA. LÓPEZ Y COMPAÑÍA.
ferios. ,
Se usa friccionándola piel, y poniendo enema una franela ^ el rtuciaes atinjo ^e
9 lli-l
I-A VARIACIÓN DE SERVICIO DESDE ABRIL DE 1873.
(xmaademái nueve di s en ayunan una tucharüditj alinterior. si fue.>e ihvétfera o; -ai
" ¡ftnbien e- pí'eleente para la g'ta, y toda dase i-e obdurationes de las ptei-uas y b k z s,
fonao callo?, etc.
Psra preservarse f n países Irio', híimedo-i, basta untarse el cuerjio. (A los ancianas
facilita la tras(iraclon) y da muclia vidj y agild .d,
o LINEA TRASATLÁNTICA PARA PUERTO-RICO Y HABANA.
A 5u vez es pui teiitoso para lurar Haigas, que iiadurss, tscrófuhs, raq.ulii mo, y á su
tez es ce|)urativodelasangre;mej rqutíla zarzaparrilla de Brislol, y luda clase ae I—« S a l i d a s d e Oádiz. . . . . . el 30 de cada mes.
enolaturos y jai abes. O « Salidas d e S a n t a n d e r . . . e M 5 de id.
En Inglate ra • stíi d nds fe ices result dos pa"a combatir todas las dolencias dichas, - Salidaf d e Corufift . . . . . e l l 6 d c id. (escala.)
as; como pira despejar el cerehro, :!to-uient.do or sus COIJ tanles y peliu'osa^- nit-blas. W
Se vende en la única tábiica, calle de !u -•alud, núm y.ctos. pr .1. y njo, • j:t" line'i,3, fe
Madrid, y rn 2.5 I farmaolas.d ogiifias v perriimeriis, » 6, i2,y iSrs. tras ' Po ma- ix¡
ccr íS por i ''e dtsciienlo eitel alma en. hxiíase i.ii pro-p ctuconirrtiü :¡ . ¡s médi•
Jos, mi ti m.'> y busto ^n la diquela, «ouibie ydumicilio ¿. i(b..düs en el vidiio, ¡.jrque hay LINEA mh I^ITORAI, ¿EN
cuines fal.-ificaltires. «-
El invei.tor, L BE BREA Y MOR'NO. C O M B I N A C I Ó N C O N LAiS SA.LTDAS T R A S A T L Á N T I C A S
O
NO MAS AGUAN NI TINTURAS PARA. LA C4RA. p4
Los i n i i t . b l e s eiiofeiiivo- Polvo-bl nioí lefres , rosa y ambroda, b¡.nqut*an y Salidas de Barcelona «1 29 para Valencia, Alicante, Cádiz, Coruña y San-
embellecen el rostro de las eñons, como ni gmi arti alo d lo.;ídor Cünoclu". Precia: tander; y de Santander el 16 para Coruña, Cádiz y Barcelona.
* y 8 r d . irasco; 2o por iS de de»cuentü por nia}or; Jj.dines, 5. y en i (, (erfunierias.
"^-Brea y Moreini,invei.tor jcrtd.tiiin, — u «
NOTA. Son dmirablspar ai listas líricos, íort-igraÜMS y dramáticos. O"
AGENTi^S.—Cádiz, A. López y C ; Buoelona, D. Ripol y G,*; Saatander,
• ^ 2 ' o "5 Pérez y GTrcfa: Coruña, E. Da Guariia; V^lancia, Dtr y C ; Alicante, Faes her-
AGUA DE COLONIA, SUPREMA, « J 3 CO, ir.aaos y C ; Madrid, Julián Moreno, Alcalá 28, .
-a
JOHANN MAKlA FAHIMA,
Reí (km Jultscíi Plaz in Coln. PILDORAS Y UNGÜENTO HOLLOWAY.
REPRESbNTAClO.N E.N MADUiü, JARD NES, 5.
Perfume persistente •• ígrada: I». PILDORAS HOLLOWAY.
Gotas en lumbre exalmina el aposento.
Fricciones eij puvisda vidagtirit 1. Estas pildoras ntn univftrsaitnente consideradas como el remedio mas eflcíz que se
En agua estrecha é iin(.ide la siü.is. conoce en el mai^do. Todaí las enterioedades provienen de un mismo origen, i sabei:
Gotisen tné ¡'ara flatos y estómagj. a impureza de la í^angre, la cual es el manantial de h vida. Dicha impureza es pronta-
Cncharaditaen agín para vSuiitus. menti neutralizada con el u^o de las pildoras Holloway. que, limpiando el estómago y
En Irotaconesqait 1 el cansancio. los intestioos, prouucen, por meaio de ^us propiedaaes balsámicas, una puriüoaclon
En baño touiüca y forta ece. XI a completa de 1* 4anj;re, dan tono y energía á los nervios y músculos, y fortiücan la or-
En agua lustra y suaviza el cutis, Kanüadon entera.
tara, quita dolor de muelas en el acto. Las pildoras Holloway j ibresilpn entre todas las medicinas por su eficacia para re-
Un Ciorritoen a ua aclara la vlist. gularizar la dijiestioii. Ejerciendo una acción en exiretno salutífera en el hígado y los
5 rs. frasco, * bolt-lla y 12 cua' liPo. ríñones, ellas ordenan las secreciones, fortifican el si tema nervioso, v d»n vigor al
Han Uegiüo 5.0 lit.os.—C lie de Jardines, núm. S, Madrid. cuerpo humano en gentral. Aun las personas menos robu.stas pueden valerse, sin te-
NO MAS HELVA ÜE . AS TINTAS.
H u e v o s i b v e c t o s p « r » escribir e l c o m e r c i o .
TINTA de lila , S --Ó. fr; seo, u cuartillo.
TlNTí. azui, 5 rs. fra c , 9 cua; tillo.
í mor, de las virtudes farliflcantes de estas pilJ oras, íon tal que, al emplearían, se aten-
gan cuidado.eamente á las inttniccionss contun'dis en los opúsculos impresos en que Vt
earuelta cadacaj» del medicauíento.
UNGÜENTO HOLLOWAY.
La ciencia (!eb medicina no ha producido, hasta aquí, remedio alguno que pueda
compararsj con el inaiavillüáo Ungüento Holloway, el cual ¡osee propiedades asimilati-
TINTAroja,a s. fi asco, y cuartillo.
TINTA Verde, (i rs. f ai^co, I i cuai tillo. vas tan extcDordin rías que, desde el mo ento en que pi-nelra la sangre, loima parle
di! ella; circulando con el Huido vital expulsa toda parucnla morbosa, refrigera y lim-
T¡NrAüegia,4 rs. franco, Tcuait.llo.

m
pia todas las partes enfeniras. y sana las llagas V úlceras de todo «énero. Este famoso
TINTA • ornerina, 1. rs. fratcj, 2 < uariillo. Ungüento es un curativo iufillbl« para U escrófula, los cánceres, los tumores, los ma-
TINTA diamantina, 1 rs. fra-.c», 2 cuai tillo. es óe piernas, la rigidez de las articulaciones, el reumatismo, la gota, la neuralgia, el
So;i aroniát cas, ;IG S''altera.>, secan en el a to. y dan duración i las plumas. lic-ddloroso, y la paralls.'s.
Frasquito, de lodo, colores, paia ).,ueba, viaj y bols lio, i real. Cada caja de Pildoras y bote de Ungüento van acompalladas de impIJas instrucciones
en espaSol relativas ai modo de usar los medicamentos.
Jardines, 5, y Salud, U, bajo—:¡5 por 1 ii de de cuento—L. Rrea, inventor. Les remedios se vendes, en cajas y botes, por todos los principales boticarios del
PRIMKK, DSCüBRlMIhMTü DKL MUNDO, mundo entero, y por SJ propietatio,elpr<>lesür Holloway, ea sa establecimiento cen-

i
tral 244, Siraud, Londres.
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"D. S i l v e r i o R o d r i g u e s L ó p e z , lici nciado en m>'iiiciiia por la Universidad de
Salamanca, y en cirugía por la de M,idrid, íundador é individuo de varias so- COMPAÑÍA POR VAPOR
ciedades cit-nKficas, «.édico del ejértiio y de ia Armada, ele , ele.
Certifico: Que he ohservario los í-fectus del Aceite e b llüta>< on sária de c coecua- DE AL
lonaí, invección del Sr. L. de Brea y «o-en»,, h.lhd-.que e-efectivam-nte nnagente
mgiénico y medicinal pi.ra 1 c:.beza, uiilisimo , ara p e mir. alivi r y aun curar varia»

i
enferme ales lie la pie d i cráDejeiniladdn del SI tema cap Lr, la c hicie liña, her NAVEGACIÓN. PACIFICO.
Pes, usagre, dolores nerviosos uecab-za, gota, reumatismo II ga», m i e s de oído-, vi-
cio verminoso, y tegnaexiHíiien-..a de va. ioí |.r(jlesores .¡stingui. ndo,e ent e • t o<
el Dr. López a. laVegí, i-s vm e pe<ijli ad esl Ace te ¡.a a h s harldas de cualqu "r
genero que ssan; es un verdadero bálsamo, cuyos maravilhsoselec^js ^ou ton .cidos; LINEA REGULAR SEMANAL.
puede re-m, lazar t.imb.en con ve .taja ;il Aceite do íiig.-dQ d. bacala i, en las escr fulas,
tisií, raquitismo, e;> la , leucorreas y ot as muchas aieccl ,nes; recomendando -u uso en
•as enfeimedadessilil tica , orno muy su,, ñor -I .Bálsamo le Opaib... v en g. neral
en toda eufemied d que esté relacioñada-on el tfjldo Ciilar qu^ refresca y fortifica,
l'udiem oasi gurar, sin lalt r en lo más niinim . á la veidad, que el Aceite 4e bellotas es
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Uü escelénie cosméti o medicinal indispensable alas familias. Yá petición del interesa- PARA RIO-JANEIRO, MONTEVIDEO, BÜENOS-AIRES, VALPARAÍSO,
Oodoyla (.r^seuteen .MaJrij a ochode oeHeinbre de mil ochocienloj setenta,—SilveíI
nodriguez López.» ARICA, ISLAY, CALLAO OE LMA Y TODOS LOS PUERTOS DEL PACIFICO
tievendeáe 12 y 18 rs. fr'Sco,en23 Odro'uerias, perfameriasy farmacias de to-
d'. el g,ot»o, con mi nombre euei fra co, cá.isula. p os,>.cto y etiquet., por hatwir uines
e indigno. lalsihcadores Dirigirse á la fá .rl a jura los pedidos cabe t e h Sa ud, nüme
rot»,cto<. í>fal. y b . j i . y J a diueso, M drid, áL,. de Brea y Moreto, proveedor ae todo
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compañía.
Del H a v r e : 24 de Octubre, 7 y 24 de Noviembre; 5 y 19 de Diciembre. Para informes, lomar pasaje y fletes, dirigirse al agente general de la Com-
De B r e s t : 26 de Octubre; 9 y 23 de Noviembre; 7 y"21 de Diciembre. pañfa
Dirigirse para mayores informes, billetes, fletes, etc.,
En M a d r i d , Pa,seo Je Recoletos, núm. 9, y Puerta del Sol, Dtím. 9 . L. RAMÍREZ, CALLE DE AI.CALA, 12, MADRID.
En S a n t a n d e r , Señores hijos de Ddriga,
En Parí», en el Grand hotel, (boulevart des Capnciaes 12.) JARABE DE HIERRO del Dr. Chable de París paralcorar Gon"
PLUS OE .lorreas. Debilidades d* I canal y Pdidas de las i er r H.—In
Eo S int-Nacaire, á M. Bourbeau, agente.
Y en las p r i n c i p a l e s poblaciones d e la P e n í n s u l a á los agentes de la com-
Panfa de seguros E l F é n i x E s p a ñ o l . • — ^ •*•
t secciono Chable.—Depósito en Miurid.Ferrer y C , Montera
51 pral.
 16 LA AMÉRICA—AÑO XVII.—NUM 8 /

AGUéQmei^t^I^A^
U s a d a p o r t o d a r i a i f a p i i i ^ i r ^ I e » y k»d«,Í» ^ t ) l « a Úe Á i r o j f c .
rj m m m mw-pox NÍTURAL.
A p r o b a d a p o r l o i » é í t t o 6 i m a i e m l n e i i t M y p o r t o d a i*. USprenta
- - — ' • Mrtraiijor». .^
STo-M
cg V J ^ ^ I ^ ^ f í ^ D A DÉLAS -VACAS JÓVENES
y p i ^ c e d é t t t e d e í Imttti^to ^ a r f i i e B s e % e Tacinraéíoii, f u n d a d o e n 1 8 6 4

EL AGUA CIRCASIANA restltig* 4 los cabellos Uancos »n primitivo eoltír, desde
«1 rubio claro hfsta el negro aiabache, slnc ausar t-l meaor daño á la piel. «No es una
tihtura.i y en su conoposicion no entra materia aignna nociva « h B.iiud; bace desapa-
recer en tres días la caspa por InTfsteraaa que esté; evítala Calda del cabello, y vuelv
la f u e n a j el vieorá los tuboí capilares. . „,
Has de lOO.OOO cerhécadoí prueban 1» excelencia lel Agua Circasiana, cujo uso
reemplaia hoy en todos los países loa oíros preparaaog y tíntuias tan dañosas para el
Precio del frasco i peseUs, frascos conteniendo el doble 71|2 pesetas.
Todos los frascos van en magmBti<s cajas úe cartón acorap iaadas de nn prospecto
con la marca y f i r a a de los énicoí depositarios.
' HERRINGS etc. C."
LISBOA.
Véndese en la botica iletosSres. Borrell hermanos. Puerta del Sol, núm. 5.
II
pvt-éUtüeiot LiAiraiX,«almil«ro d a la L e ^ o n d e Honor, e t e .
Por medio de la vacunación practicada coa el Covr-pox tomado directamente de
las vacas jóvenes no solo se evitan los funestos t fe tos de la viruela, si no que también
ge esl4 seguro de no inocular otra enfermedad alguna contagiosa, como acontece fre-
, cuentemente con la vacunación buluaua, llamada vulgarmente de brazo á brazo y en
partic lar la siblis, segUQ réstilta de los experimentos faechos.con este objeto por la
Academia de medicina de Patis, y otras.
Este nuevo método, dado á conocer por el celebre Dr. Lanoii, ha sido universal-
mente adoptado en Francia, Inglaterra, Alemania, eo América, eic.
La vacuua que remite el Dr.Lanol? viene en tubitos de vidrio, donde s« con»erva
mucbo mejor que ehcristalesplanosespuraj tan eflcazcomo si se tomara directamen-
te de las Tacas Las remesas ss reciben tedas las semanas.
Precio de cada tuho, 1 rs.
Depósito exclusivo para toJa España y posesiones americanas, farmacia del Dr¿ Si-

G U I A MÉDICA D E L MATRIMONIO llilft món, calle del Caballero de Gracia, n&m. ó. Uadrid,

- ..• .-^v£»*»4íí.=ww--'^«"^-»*:^5Si«Ei

é instrucciones para asegarar su objeto moral, Acompañada de direcciones perso-

nales de imporlaDCia vital, dedicadas á los casados ; solteros de ambos sexos.
Por el médico cousuilor
DR. J. L. CURTÍS.
Traducida al caslellano por D. G. A. Cueva. Un tomo en 8.* d j 200 páginas, ocho ^i. 151, R Ü E M O r t T M A R T R E , 151, -*«
j " w » ES» 2 . » 2^ £. P A. R I S '
POR EL MISMO AUTOR. c a._B .» 5 •» B ^ = ^

DE LA VIRILIDAD
D Í : LAS CAUSAS DE SU DECADENCIA PREMATURA
é instrucciones para obien«r su complelo reslabiecimiento; ensayo médico, dedi- Í¡...""Í',^
ROB C L E R E T £ ,
DEPURATIVO AL YODURO DE POTASIO. %:^X;M
cado á los que padecen de resultas de sus excesos, de hábitos solitarios ó del c o a - i / . ÍÍA:- fO TENTE DEPURATIVO DB LASÁNGRS Y DE LOS HUMüHt:S
tagi o; seguido de observaciones sobre la espermatorrea, la impoiencia, la esteri-
lidad, e i c ; el tratamiento de la sífilis, de la gonorrga y de la blenorragia; cura del
contagio sin mercurio y su prevención usando la recela del autor. (Su infalible lo- OBAGÍAS PURGATIVAS Y LAXANTES DE BñUDEHGl
ción.) Contra laa afecciones del Ettomago, j da loi istettlnos, del Higaiio y (Í< i
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dirigirse los pedidos acompañados de su importe.
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España y América, los corresponsales de la casa. W i Contra la Jaqueca, Mevralgia», Afeodanei B«rTÍoita del Estomago, I
Los enfermos pueden dirigirse por correspondencia al doctor Curtís, para con- ? ^
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urroiisates reielJes, combate la caus» Je la iiitermilencia y restabit.c« ii;>

CATECISMO se 1—(
íiía idade» piimitiías de la sangre. (BOOCHA»DOT), Profesor de Higiíiue ea
3-o P la tMcultíd de Medicina de Pari».
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D E L A RELIGIÓN N A T U R A L ,
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SloNíg»»AT, UKIACB J ALOMAR, plaia del Borae, 6; — V a l e n c i a , ]SJV-
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POR a rHi de GKSOS, ANBBKS y FABIA, CAPAFO.-ÍS y ÍJOUINOO, C o r u w a , ÍISSCÍNSA
ro ; ;A ^ BTios j J. VitLA», Oirled», E. MABTIHK» J C. SANTAMARI-NA, Ciij»9>, A.
D. JUAN ALONSO Y EGÜILAZ,

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a se h.'S» P i c a o , i£. CUESTA.
REDACTOR DE f EL UNIVERSAL.»
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Este folleto encierra en una forma clara, metódica y compendio-
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sa, el resumen sustancial de los principios de la religión natural, es a o
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decir de la religión que á todos los hombres ilustrados y de sano cri- PAÁIS ^ , ^ ' - 1 . 9 £NFEhis,..í. sito ge-
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terio dicta su simple buen sentido. Contiene en su primera parte un pg 05 •o
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prólogo, una introducción, el credo, mandamientos, etc., etc.; y ea
la segunda, preguntas y respuestas sobre el texto.
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