Burkert - Religión Griega: Hermes, Deméter, Dionisio, Hefesto y Ares
Joan Horrach Morell
En el fragmento que he escogido se narran las diferentes características de algunos
de los Dioses Olímpicos. Hermes era el mensajero de los dioses, era considerado un embaucador y normalmente era venerado con una figura fálica. Homero relaciona constantemente a Hermes con lo furtivo y con los robos; probablemente este calificativo surgiera a raíz del plan que realizó para matar al gigante Argos. Entrado el siglo V a.C se empieza a representar a Hermes como un joven atlético, a partir de ahí también será considerado el dios de los gimnasios. Deméter era la diosa de la agricultura, en la época de la cosecha se solían celebrar fiestas en honor a Deméter, ya que se consideraba que era ella la que llenaba el granero. Uno de los mitos griegos más famosos es el rapto de Perséfone, la hija de Zeus y Deméter. Fue raptada por Hades; mientras ésta está en cautiverio nada germina ni crece, al ser liberada todo vuelve a la normalidad, pero deberá volver al Hades durante un tercio de cada año. Muchos estudiosos han relacionado esta anécdota como una alegoría del ciclo vegetativo del Mediterráneo. Deméter y Perséfone gozaron de gran importancia en Eleusis donde los ritos de iniciación al culto de los dioses era una de las celebraciones más importantes de la antigua Grecia. Hefesto era el dios de la forja y del fuego, era considerado un ser deforme y lisiado por el hecho de que su madre, Hera lo arrojo desde el cielo. En un principio la figura de Hefesto gozó de gran importancia, pero con el tiempo las ciudades relegaron lo artesano a un segundo plano y solo conservó su importancia en Atenas. Ares es considerado el dios de la guerra y del fragor del combate, siempre es tratado como dios inferior a Atenea, en la Ilíada se nos presenta a Ares como aliado de los troyanos, los perdedores. Su contraparte será Atenea; Ares representa los horrores de la guerra, mientras Atenea es la que encarna el esplendor de la victoria (Niké). Dionisio es el dios de la fertilidad, del vino y del éxtasis producido por éste; un éxtasis que solo se alcanza como fenómeno grupal durante celebraciones, en este momento los hombres se evaden de los males cotidianos. Dionisio también fue el que enseñó a los humanos a cultivar y producir el vino. Un mito cuenta que el primer campesino que presentó el vino fue asesinado por sus compañeros ya que estos, al empezar a notar la embriaguez se pensaron que estaban tratando de envenenarlos. Como en el caso de Hermes, a partir del siglo V a.C Dionisio es representado como un joven también desnudo, envolviéndolo así en una atmosfera erótica, ya que no debemos olvidar que normalmente vino y sexo van unidos.