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INTRODUCCIÓN
9. ANÁLISIS 10
10. CONCLUSIÓN 11
INTRODUCCIÒN
Por vivir la Iglesia del Señor días de "Restauración de las Verdades Perdidas”, la fiesta
conocida como Navidad y su doctrina, así como otras prácticas, costumbres y tradiciones
que se han mezclado, han tenido que ser estudiadas e investigadas a la luz de La Palabra de
Dios, encontrando, como ha ocurrido en tantas otras áreas de la enseñanza bíblica, que por
siglos se han ido introduciendo errores que no pueden dejarse pasar por alto hoy. Algunos
de ellos serán mencionados en estas notas y otros serán enseñados a través de diferentes
medios, pero lo más importante que debe existir en nuestros corazones, es una actitud
humilde para reconocer que todos juntos le hemos fallado al Señor y que en estos días de
tanta iluminación escritural nuestros espíritus deben estar prestos a oír la voz del Espíritu
Santo sin ánimo contencioso ni irritable, sino con mansedumbre y sumisión para permitirle
a El, quien es el Restaurador de todas las cosas, conducirnos con gozo y libertad a los
cambios y renovaciones que sólo El desea, para bien de Su pueblo.
1.2. La fecha del nacimiento de Jesús no está especificada en La Biblia, sólo podemos
encontrar una aproximación que nos ilustrará los grandes errores cometidos a través de los
siglos por nosotros los creyentes. Lucas 2:8 dice: “Había pastores en la misma región, que
velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño". Esto nos muestra una
práctica y costumbre de los pastores en Israel, en la cual destacaremos lo siguiente: este
comportamiento era manifestado por los pastores a mediados de la primavera, durante el
verano y al inicio del otoño, lo cual indica claramente que la restante estación del año no
era, por sus características climáticas, apta para ello. El otoño es la estación del año ubicada
entre setiembre y la primera quincena de diciembre y el resto de este mes es época invernal
e inclemente. Según este pasaje Jesús debió haber nacido a finales de setiembre o en los
primeros días de octubre.
1.3. Lucas 2:4 nos enseña que al haber decretado el César romano, censo de todo Israel,
cada familia debía viajar a la ciudad de sus padres e inscribirse ahí. El período para realizar
el censo fue considerado tomando en cuenta las costumbres y tradiciones judías, las cuales
respetó el imperio de Roma, pues los judíos conocedores y habitantes de sus tierras sabían
cuáles eran las mejores estaciones del año para hacer tan extraordinario movimiento y
traslado de gentes. José llevó a su mujer María con casi nueve meses de embarazo sobre
una bestia de carga desde Nazareth de Galilea hasta Belén de Judea, es decir, 110 Km., lo
cual sólo era posible en una temporada que no fuera invierno, época en la cual la lluvia y a
veces inclusive la nieve eran inclementes y casi imposibles de soportar en un trayecto tan
largo, sin esperar trágicas consecuencias. Es digno de notar que el invierno en Israel
comprende aproximadamente desde la segunda quincena de diciembre hasta marzo.
1.4. La Biblia también nos revela algo importante sobre el nacimiento del Mesías en los
acontecimientos que rodean el nacimiento de Juan El Bautista (Lucas 1:5-25). La Palabra
afirma que Zacarías, padre de Juan, era sacerdote de la orden de Abías, orden sacerdotal
que según 1 Crónicas 24:7-19 tenía por orden divina a través de los profetas de Dios un
tiempo específico o turno de servicio definido durante el año.
Zacarías tuvo oportunidad de entrar al santuario seis meses después, ya que los turnos
sacerdotales se repetían cada seis meses, o sea, siendo su orden sacerdotal la octava, el
turno que le correspondía estaba entre Illar 27 y Sirván 5 lo que sería, en términos
aproximados, en algún momento entre junio o julio. Zacarías estuvo ocho días más de
turno, pues el sacerdocio junto, es decir, todas las clases sacerdotales juntas, servían al
Señor en otras ocasiones más, estas eran la Pascua, la Fiesta de los Tabernáculos y el
Pentecostés. De esta segunda vez de servicio en el Templo, volvió Zacarías a Judea (a 30
millas de distancia) y después de esto "concibió su mujer" (Lucas 1-22-24), lo que sería
aproximadamente en el mes de Julio por lo cual Juan debió haber nacido alrededor del mes
de abril (esto es, nueve meses después). Juan, de acuerdo con Las Escrituras, era seis meses
mayor que Jesús (Lucas 1:36) lo que implica que Cristo nació en la carne entre setiembre o
en los primeros días de octubre (Lucas 1:26-36); o sea, a inicios del otoño y no el 24 o el 25
de diciembre. Como se puede observar, ninguna de las dos fechas coincide con el mes de
diciembre, como tiempo del nacimiento de Jesús.
Algo que tampoco aparece en Las Escrituras es la hora del alumbramiento y nacimiento del
Salvador como se ha afirmado que acaeció a las 12 media noche del 24 de diciembre.
2. ¿Dónde surgió la idea del 25 de diciembre como fecha del nacimiento de Jesús?
2.2. Aunque no podemos trazar con exactitud el comienzo de la Navidad, sus raíces parecen
estar en la adoración de Mitra, dios de Persia. Se cuenta que este dios nació en una cueva
adonde vinieron pastores a adorarle como el hijo de dios. Sus seguidores celebraban el
cumpleaños anualmente el 25 de diciembre. Creían que el dios de las tinieblas lo mató y
que cada año resucitaba de entre los muertos. Temprano en la primavera los seguidores de
Mitra celebraban su resurrección degollando un toro blanco o un cordero sobre una parrilla
de metal. Debajo de ella, la sangre del cordero chorreaba y "bautizaba" a los nuevos
convertidos que se unían a Mitra en la guerra eterna contra el mal. Los celebrantes tomaban
pan y vino en una comunión en masa ¡Casi 500 años antes del nacimiento de Jesús, ya
satanás estaba preparando una falsificación, una ilusión, para engañar y confundir a los que
serían seguidores del verdadero Cordero! Los romanos abrazaron este culto satánico, el
cual se convirtió en un gran competidor del cristianismo en el tercer y cuarto siglos DC.
Para contrarrestarlo, la Iglesia cambió el nombre de Mitra por el de Sol Invictus y le
dedicaron un día a la semana como culto sagrado al día del sol o domingo (Sunday). Al
parecer, ningún tiempo resultaba más apropiado para celebrar al Hijo que se llamó a Sí
mismo "la luz del mundo".
2.3. Antes del reinado de Constantino (306 DC), la Iglesia era tremendamente perseguida,
razón por la cual ésta comenzó a asimilar y a adoptar muchos ritos paganos, los que
intentaba bautizar con nombres sagrados para poder enfocarlos en el Señor. Parece que uno
de estos rituales era la celebración del 25 de diciembre (cumpleaños de Mitra) como el
cumpleaños de Jesús. No se hizo demasiado complicado, ya satanás había establecido a
Mitra como una falsificación razonable, como se ha mencionado, solamente se requería un
cambio de nombre. Esto hizo que el judío se sintiera rezagado; y con razón, existe base
bíblica para ello. El judío ha sido llamado para ser "santo", separado para Dios. Y de la
misma manera que el judío debe permanecer apartado de la cultura humanista, así también
el Cuerpo del Mesías, Su Iglesia, debe tener celebraciones notablemente diferentes de las
del resto del mundo.
babilónico y popular era conocido como Mitraísmo en los misterios babilónicos religiosos.
Se supone que Mitra había nacido en esa época al igual que otros falsos dioses (demonios),
como Osiris, Hércules, Baco, Orus, Adonis, Júpiter, Tamuz, entre otros. Todos ellos según
la leyenda pagana nacieron en la época invernal conocida como navidad. A nuestro Señor
le quisieron poner al mismo nivel que estos falsos dioses, lo cual es repugnante y diabólico.
2.6. Esta fiesta llegó a Roma e inicialmente se le llamó Saturnalia, pues se festejaba al dios
Saturno, que era el mismo Tamuz, llamado también el dios escondido (Hechos 17:23 -note
la astucia de Pablo usando los términos de los inconversos para llevarles el Evangelio-).
Esta festividad era vil e inmoral y trajo un tremendo desprestigio a Roma. La iglesia
Católica Romana ha tomado hasta el día de hoy esta fiesta, como ya se indicó y el
Cristianismo lamentablemente también. (Tamuz, Nimrod, Saturno, son nombres del mismo
dios falso figura del anticristo).
3.1. Con respecto a Santa Claus (Santa) o San Nicolás (en otros países las costumbres
utilizan otro personaje en su lugar lo cual es igual en cuanto a su influencia mentirosa y
antibíblica sobre la humanidad), la tradición afirma que nació en los países nórdicos de
Europa y otros en Norte América; lo cierto es que venga de donde venga el propósito de
satanás en todo esto ha sido desvirtuar lo que Las Escrituras enseñan sobre nuestro Dios,
como "Dador de toda buena dádiva y todo don perfecto" (Santiago 1:17). Los padres de
familia con esta práctica hacen que sus hijos estén esperando regalos de este personaje y no
de Dios; siendo este el objetivo del diablo: tratar de impedir que sólo Dios sea glorificado y
consiguiendo además, que espíritus de mentira llenen de engaño las bocas de los padres
para con sus hijos; esto es, los induce y los hace caer en pecado (lea usted Génesis 22:14;
Salmo 121:1-2; Marcos 11:24; Mateo 7:7).
3.2. Es interesante enseñar un punto de vista muy respetado entre los estudiosos de la
Biblia concerniente a este San Nicolás en los primeros años de la Iglesia, quien se desvió de
la fe y cayó en la blasfemia y en la apostasía, logrando gran cantidad de adeptos y
constituyendo una doctrina falsa o secta, proclamándose como un Mesías, es decir, un
anticristo. Apocalipsis 2:15 dice, hablando el Espíritu a la Iglesia en Pérgamo: "Y también
tienes a los que retienen la doctrina de los nicolaítas, la que yo aborrezco". La conclusión
a la que podemos llegar es que cualquiera que sea el origen de esta práctica, ella no es
bíblica sino más bien anticristiana. Alejémosla de nosotros. Amén
3.3. En cuanto a los duendes, cualquiera que haya tenido que verse involucrado en
liberación de personas oprimidas por demonios no podrá negar que una de las
manifestaciones satánicas para destruir vidas, es mediante las apariciones de duendes o
trasgos fantasmagóricos (es decir, en palabras sencillas, apariciones de demonios). Los
duendes, no en la tradición sino en la práctica y vida de la Iglesia han estado y estarán
siempre relacionados con la obra de satanás a través de la hechicería y el ocultismo. Los
duendes, que son demonios manifestados o figuras de demonios, han sido causa de
destrucción de hogares y vidas aunque al presentarlos en dibujos inofensivos (gnomos) nos
cause cierto sentimiento bondadoso hacia ellos. Son demonios disfrazados como ángeles de
luz (II Corintios 11:14). Lamentablemente esta época navideña hace que muchos hogares
se llenen de ellos en la figura de pequeños ídolos. La adoración ignorante que se les ha
dado, ha hecho que su influencia negativa fuera inevitable y nefasta para muchos cristianos.
Qué Dios nos ayude a tornar nuestros ojos a Su Palabra. Amén. Lea Romanos 1:18-32.
4.1. Estos reyes, según se menciona en La Escritura eran “magos”. Sin embargo, la
palabra usada tanto en el hebreo como en el griego significa sabios (astrónomos) y no
ocultistas o astrólogos como se ha querido a veces interpretar. Eran además estudiosos de
Las Escrituras hebreas, de ahí que Dios se revelara a ellos, los métodos de Dios no
cambian. El no habla a los hombres por la hechicería ni la adivinación, sino por su Santa
Palabra. Aleluya.
4.2. La Biblia a través de los profetas (Isaías y Moisés) manifiesta que reyes vendrían a
postrarse ante el Mesías de Dios indicando que su procedencia sería de tierras cercanas a
Egipto, Persia y Arabia. Pero en ningún momento enseña La Palabra que serían tres reyes,
ya que probablemente fueron muchos más así como tampoco se menciona que sus nombres
fueran Melchor, Gaspar ni Baltasar (algo que sí menciona la tradición). El cristiano no se
mueve por costumbres sino por La Palabra de Dios.
4.3. El número tres es especulativo, pues se sabe que al Señor se le dieron tres tipos de
presentes diferentes: oro, incienso y mirra; presentes que cada rey pudo haber dado y que
tenían un claro simbolismo bíblico de lo que habría de ser la vida del niño que adoraron en
Belén.
4.4. Los presentes o regalos fueron traídos al niño, es decir a Jesús y no fueron regalos de
Jesús a los reyes. Estos sabios de Oriente dieron a Dios lo mejor que tenían y reconocieron
que Él era el Hijo de Dios, adorándole y postrándose. Aleluya. Si damos regalos a quien
bíblicamente deberíamos dárselos, éste sería al Señor (Mateo 2:11).El humanismo y el error
se han introducido en el mundo durante estas fiestas y se gasta y se despilfarra dinero en
regalos entre unos y otros sin tomar en cuenta a Dios. Los presentes a los hombres deben
ser la consecuencia de honrar primeramente a Dios y Su obra. Amén.
4.5. En Mateo 2:11, encontramos que estos reyes visitaron a María en una casa y no en el
pesebre como enseña la tradición. Ya que la práctica de intercambiar regalos surge del acto
de adoración de los sabios de Oriente, ¿no sería lo más lógico que se hiciera en fecha
posterior al 24? Pues si ese día hubiera sido cuando Jesús nació, ellos lo visitaron
posteriormente. La ambigüedad de opiniones muestra que la práctica no comenzó con la
Iglesia Primitiva poseedora de la verdad y la guianza del Espíritu.
4.6. No queremos decir que sea malo expresar el amor a nuestros seres queridos por medio
de un presente, pero es algo a lo cual La Escritura nos motiva a hacer en todas las épocas.
5.1. El uso de un árbol como decoración en el hogar para celebrar ciertas fiestas es una de
las costumbres más antiguas que todavía existen. Los egipcios y hebreos empleaban ramas
de árboles siempre verdes para simbolizar la vida eterna. La adoración a los árboles era
una práctica muy común entre los pueblos paganos. Esa costumbre sobrevivió aún después
que el cristianismo se introdujo en esos pueblos (lamentablemente). Eso se aprecia en la
tradición escandinava de decorar la casa y el granero con ramas de una planta verde
conocida como "siempre-viva", durante la época de Año Nuevo, para ahuyentar al diablo y
a los malos espíritus (prácticas de hechicería). También en Alemania se acostumbraba
colocar un árbol a la entrada de la casa durante sus celebraciones navideñas (note su
semejanza con la práctica religiosa de colocar la palma bendita en cruz para Semana Santa
y las cebollas o ajos por la brujería).
5.2. La tradición del árbol de Navidad que se conserva actualmente se originó en Alemania
Occidental durante la época medieval. Los alemanes efectuaban todos los años una obra de
teatro sobre Adán y Eva en la cual la decoración principal era un pino adornado con
manzanas que llamaban el “árbol del paraíso”. De ahí salió esa tradición que los alemanes
extendieron, pues luego le colocaron obleas blancas que representaban la ostia. Con el
tiempo las obleas se convirtieron en galletitas de formas muy diversas. En la misma
habitación donde colocaban el árbol ponían la pirámide navideña. Esta era una estructura
triangular de madera con estandartes para exhibir figuras alegóricas a la Pascua: el Niño
Dios, velas y una estrella (de ahí pudo originarse lo que en los pueblos hispanos se llama el
portal el cual está lleno como todos sabemos de figuras idolátricas y costumbrismos
antibíblicos). Aproximadamente en el siglo XIX la costumbre se extendió entre los
alemanes luteranos pero no fue sino hasta el siglo siguiente que el árbol de Navidad se
convirtió en una costumbre arraigada. En el siglo XIX se introdujo en Inglaterra el árbol de
Navidad, luego que el príncipe Alberto de Alemania se casó con la reina Victoria de
Inglaterra (1841). El árbol victoriano se caracterizaba por sus decoraciones que incluían
caramelos, pequeñas tortas, cintas v cadenas hechas de papeles de colores. Los
historiadores explican que fueron los inmigrantes alemanes quienes llevaron esa tradición a
Estados Unidos, con lo cual se extendió por toda América.
6. Algunas otras tradiciones que pueden estar detrás de estas prácticas paganas
agregadas a la celebración navideña.
6.1. En la fábula babilónica se decía que Semiramis, madre de Tamuz, dios pagano,
afirmaba que durante una noche un árbol verde se desarrolló de un árbol muerto, figura de
su esposo fallecido (Nimrod). El árbol de pino llegó a ser símbolo de que Nimrod había
revivido en su hijo Tamuz. Nimrod era y es símbolo de Babilonia la religión apóstata y del
poder del anticristo. Nimrod y Tamuz son claras figuras del anticristo (recordemos que
Nimrod fue el primer hombre que se proclamó Dios. El edificó Nínive y Babilonia pueblos
que son símbolos de rebelión).
6.2. El árbol de la vida que menciona Apocalipsis 22:2, se ha tomado como base escritural
para justificar su uso; pero recordemos que Dios aunque ha usado figuras y símbolos para
hablarnos no nos permite la idolatría y el paganismo.
6.3. Hoy, aunque no se adora al árbol y su uso es diferente, no se puede negar que posee
una influencia negativa y tiene su origen en las costumbres paganas de Babilonia y en
prácticas de superstición y hechicerías de los pueblos centros europeos de la época del
oscurantismo medieval.
6.4. Los arreglos con luces en los árboles y otras cosas eran símbolos de preparación para
la adoración al dios Mitra (sol).
7.1. Isaías 1:29 "Entonces os avergonzarán las encinas que amasteis y os afrentarán los
huertos que escogisteis”. (Recordemos que otra de las prácticas religiosas del romanismo es
levantar huertos y llenarlos de frutas como parte de sus celebraciones).
7.3. Ezequiel 6:13 "Y sabréis que Yo soy Jehová cuando sus muertos estén en medio de sus
ídolos, en derredor de sus altares, sobre todo collado alto, en todas las cumbres de los
montes, debajo de todo árbol frondoso y debajo de toda encina espesa, lugares donde
ofrecieron incienso a todos sus ídolos".
7.4. Ezequiel 8:13-18 "Me dijo después: Vuélvete aún, verás abominaciones mayores que
hacen estos. Y me llevó a la entrada de la casa de Jehová, que está al norte, y he aquí
mujeres que estaban allí sentadas endechando a Tamuz. Luego me dijo: ¿No ves hijo de
hombre? Vuélvete aún, verás abominaciones mayores que éstas. Y me llevó al atrio de
adentro de la casa de Jehová; y he aquí junto a la entrada del templo de Jehová, entre la
entrada y el altar, como veinticinco varones, sus espaldas vueltas al templo de Jehová y
sus rostros hacia el oriente, y adoraban al sol, postrándose hacía el oriente. Y me dijo: ¿No
has visto, hijo de hombre? ¿Es cosa liviana para la casa de Judá hacer las abominaciones
que hacen aquí? Después que han llenado de maldad la tierra, se volvieron a mí para
irritarme, he aquí que aplican el ramo a sus narices. Pues yo también procederé con furor,
no perdonará mi ojo, ni tendré misericordia; y gritarán a mis oídos con gran voz, y no los
oiré"
7.5. Porque ellos también se edificarán lugares altos, estatuas, e imágenes de Asera, en
todo collado alto y debajo de todo árbol frondoso. (Recuerde que en muchos lugares, se
coloca un pasito debajo del árbol navideño con el "niño Dios"' que es venerado
idolátricamente) (Lea Deut. 12:2-3).
7.6. II Reyes 16:2-4 "Cuando comenzó a reinar Acaz (...) y no hizo lo recto delante de
Jehová su Dios (...) Así mismo sacrificó y quemó incienso en los lugares altos y debajo de
todo árbol frondoso”. (Lea 11 Reyes 17:10-13).
Jeremías 10:3-4 "Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del
bosque cortaron, obra de manos de artífice con buril. Con plata y oro lo adornan; con
clavos y martillo lo afirman para que no se mueva".
Cuenta el libro de Macabeos, el cual forma parte de los libros llamados Apócrifos, que allá
para el año 165 A.C. el pueblo de Israel se ofreció a los mandatos del rey griego Antíoco
Epífanes, "abandonaron la alianza santa, haciendo causa común con los gentiles y se
vendieron al mal". El rey construyó una ciudad la cual llamó con su propio nombre,
Antioquía, y también envió sus tropas a Judá y a Jerusalén "y con falsía les habló palabras
de paz, en las que ellos creyeron". Muy pronto, el malvado rey decretó que todos
abandonaran las leyes dadas por Dios y que no guardaran Sus días de fiesta. Así, hubo
quienes suprimieron los holocaustos y la circuncisión, profanaron los sábados y las
solemnidades, y edificaron altares a ídolos. El paganismo y las costumbres griegas se
adentraron en la cultura judía.
Se levantó de entre ellos la familia de Matatías con sus cinco hijos: Judas (apodado el
Macabeo), Simón, Juan, Jonatán y Eliezer. Proclamaron ayuno, imploraron la misericordia
de Dios y se lanzaron a atacar a los idólatras y opresores. Y el Dios de Israel, Quien tiende
a no fijarse en números, puso en manos de este pequeño ejército a todos sus enemigos De
esta forma, volvieron a apoderarse de Jerusalén y del Templo y volvieron a hacer sus
sacrificios en él.
El judío sigue y seguirá siendo el pueblo escogido por Dios. Ellos celebran "Hanukkah"
como símbolo de la liberación que obtuvieron de los que querían "gentilizarlos" y dar al
traste con lo que Dios les tiene ordenado. ¿Y qué de los cristianos y la fiesta de Navidad?
¿Tenemos acaso libertad para asimilarnos con los paganos?
9. ANALISIS
Para poder convertirse en el Cordero de Dios, Jesús tenía que nacer, pero fue Su muerte la
que proveyó la expiación de los pecados y es Su resurrección la que provee la vida eterna
(Rom. 5:9-10). La Iglesia tiende a enfocarse más en Su nacimiento que en Su muerte. Al
hacerlo así, a los ojos de muchos creyentes, El sigue siendo el "dulce bebito Jesús" y nunca
llega a ser el Cordero de Dios. Así se dificulta comprender que El es el Mismo que está
abriendo los sellos del libro y desatando la ira de Dios sobre el mundo (Apoc. 6:17; 8: l).
Primitiva no celebraba los cumpleaños, ningún cumpleaños, por considerar ésta una
costumbre pagana. Quizás se deba a ello el que Dios no nos dejó saber en qué fecha nació
Jesús, probablemente para evitar que cayéramos en la idolatría. Sin embargo, sí nos deja
una serie de fiestas en el capítulo 23 de Levítico para que conmemoremos Su Creación, Su
Muerte y Su Resurrección entre otras. (Conste, que no dice que son las fiestas de los judíos,
sino las fiestas solemnes de Jehová). Pero no aparece entre ellas la celebración de la
Navidad. ¿Será casualidad el hecho que las fiestas bíblicas, que se celebran desde hace más
de 3,500 años, no han sido sacadas de su contexto y proporción, mientras que las
celebraciones inventadas por la "religión" han degenerado en aberraciones o desvíos de los
verdaderos propósitos para las cuales fueron instituidas por el hombre?
En ninguna parte de las Escrituras Mesiánicas se menciona nada que se relacione con una
celebración, ni siquiera algo que conmemore cualquier cosa que tenga que ver con el día de
Su nacimiento. De hecho, el único lugar en que Jesús dice algo sobre cómo recordarlo es en
Su última cena de Pascua con Sus discípulos "Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les
dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí"
(Lucas 22:19).
10. CONCLUSIÓN
La palabra Navidad viene de un vocablo más antiguo, el cual es Nativitá (sobre lo que se ha
discutido) que significa nacimiento que da vida y lamentamos que la humanidad haya dado
una idea tan desviada de este conocimiento que cambió la historia del mundo. Jamás
podremos eliminar de La Escritura este hecho glorioso del nacimiento de Cristo, y mucho
menos, eliminar lo que implicó para el hombre caído la verdadera Nativitá. Se dio una vez,
pues era necesario que el "verbo se hiciera carne", pero lo más importante es que este Hijo
de Dios creció y habitó entre los hombres y vimos Su gloria, siendo el propósito de su
encarnación crecer y cumplir con el ministerio encomendado por El Padre, ir como Cordero
de Dios a la muerte por nuestros pecados. Importante es recordar que la muerte en el
Calvario se convirtió en resurrección triunfal; es por ello que Jesús nos motiva a recordar y
festejar más que su nacimiento (aunque enfatizo que no hay ningún pecado en recordarlo y
predicarlo a la manera bíblica), su muerte y resurrección. "Así pues, todas las veces que
comiereis este pan y bebiereis de esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que El
venga" II Cor. 11:26
Añadir o quitar de lo que el Señor nos ha ordenado es un grave pecado. El Señor dijo : "No
añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los
mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordeno" (Deut. 4:2 \ ver además 12:32;
Prov. 30:6). Cuando El dice "para que guardéis los mandamientos", eso significa que, si
los cambiamos, no los habremos cumplido porque ya dejan de ser los mandamientos de
Dios. Sin embargo, SI es posible guardar los mandamientos de Dios: “Porque este
mandamiento que yo te ordeno hoy no es demasiado difícil para ti, ni está lejos" (Deut.
30:1l).
Estamos en una encrucijada. Nuestra sociedad se desmorona cada día más; hay drogas,
homicidios, familias desmembradas, abortos, homosexualismo... Nos inquieta el estado de
la economía personal y mundial. Por todas partes oímos hablar de “pactos de paz" que están
siendo firmados con el derramamiento de sangre inocente. ¿Y la Iglesia? ... "cómplice y
como dormida”, con un nuevo viento de doctrina, y esperando gozarse de avivamientos
mientras es partícipe de todas las delicias de la "Babel" resucitada de Apocalipsis 17 y 18.
Busca del Señor para que compruebes si estas cosas que hemos compartido contigo son
ciertas. Debes tener convencimiento en tu corazón.
Ceñirse a La Palabra y desligarse de la tradición representa dar un atrevido paso de fe. Para
lograrlo, primero debemos estar seguros que hemos escuchado de parte del Señor. Una vez
hayamos oído Su voz, el Señor requiere de ti que actúes sobre esa Palabra: “Y al que sabe
hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado" (Sant. 4:17). Es tiempo que la Novia se someta
bajo la autoridad del Novio. ¿Crees que unas costumbres paganas puedan ser aceptadas por
el Dios que adoramos para festejarle Su cumpleaños, algo que de todos modos El no nos
pidió que hiciéramos? Todavía tenemos que limpiarnos de algunas manchas y arrugas.
b. Ser sabio y prudente a la hora de operar los cambios, no por contienda ni vanagloria ni
mucho menos por legalismo. Los cambios en el Señor se operan primero en el corazón y
luego externamente. Mantenga la paz en el hogar y sea manso para enseñar e instruir a su
familia en La Palabra. No permita que en estos días su lengua hable fábulas o mentiras.
d. Con respecto a los adornos en esta época, queremos decirles que no son tan relevantes;
sí podemos aprovechar esta época para dar testimonio de nuestra fe cristiana.
Recomendamos que usted elimine todo tipo de adorno que es antibíblico y utilice letras,
estandartes, banderines, arreglos florales que hablen de Jesucristo, sin que se confunda con
idolatría y paganismo.