Sei sulla pagina 1di 107

UNIVERSIDAD ACADEMIA DE HUMANISMO CRISTIANO

ESCUELA DE HISTORIA

LA CONTRUCCION DEL CONCEPTO PATRIMONIO CULTURAL EN CHILE.


¿MECANISMO DE CONTROL SOCIAL O PROTECTOR DE LA IDNETIDAD, LA
MEMORIA Y LA CULTURA?

La experiencia de la Región de los Ríos.

Alumno: Ramírez Fernández Jonathan Mauricio

Profesor Guía: Mellado González Leonardo

Tesis Para Optar Al Grado De Licenciado En Historia Mención en Estudios Culturales

Santiago, 2015
Agradecimientos

Primero que todo quisiera agradecer a la vida y su experiencia, por darme la


oportunidad de realizar distintos viajes urbanos, rurales, de montaña, de costa, los cuales
me han permitido aprender de diversas formas como se conforma la sociedad en sus
distintos ámbitos y esferas. Junto con lo anterior, agradezco a la Escuela de Historia de
la Universidad, por darme las herramientas necesarias para poder enfrentarme en mis
desafíos personales como profesionales. Tercero, a mis padres, por originar una
construcción identitaria en conjunto a la naturaleza y en los distintos pisos geográficos
emplazados en el sur de Chile y por sobre todo la actual Región de Los Ríos, espacio
físico donde se realizo esta tesis. Cuarto, agradezco a quienes han formado parte de mi
formación académica y profesional, aquellos que no siempre son nombrados pero que
de alguna manera influyeron en mis conocimientos, esos amigos de largas
conversaciones que aportaban desenfrenadamente el deseo de reivindicar a quienes han
sido acallados o pasados a llevar por el Sistema Capitalista, un sistema desigual. Por
último pero no menos importante, a mis hijas Arianna y Maitén por ser mi principal
motivación en la vida ya que me han liberado del individualismo de logros personales
generando que todo lo que haga sea en torno a otro, en torno a ellas.

Gracias, eternamente.

2
Índice

Introducción....................................................................................................................5
Capítulo I - Antecedentes de la Investigación...............................................................12
1.1. El nacimiento de la Región de los Ríos y la conformación de lo que será
considerado como Patrimonio Cultural...........................................................................12
Capitulo II – Concepciones Teóricos............................................................................17
2.1. Concepciones básicas del Patrimonio Cultural......................................................17
1.2. Conceptos que se han ligado al resultado del proceso de Patrimonialización......28
1.2.1. La Construcción de la Identidad. Individual y Colectiva....................................28
1.2.2. Las memorias individuales, colectivas y las memorias débiles y fuertes. La
historia oficial..................................................................................................................30
1.2.3. El Patrimonio Cultural y su Función Social........................................................34
Capitulo III - EL Patrimonio Cultural en relación con los procesos históricos de Chile.
.........................................................................................................................................38
3.1. El nacimiento del concepto de Patrimonio Cultural..............................................38
3.2. EL Patrimonio Cultural y la construcción del Estado Nación. El Nacionalismo y el
siglo XIX.........................................................................................................................40
3.3. El Patrimonio Cultural y su función acumuladora de Capital. El Patrimonio
Cultural como un objeto mercantil..................................................................................44
3.4. La construcción del Patrimonio Cultural desde la Institucionalidad y los
movimientos sociales en torno a su concepción..............................................................49
Capítulo IV – Sectores Subalternos (Indígenas Huilliches) y la relación con la
imposición del Patrimonio Cultural proveniente desde el Estado...................................54
4.1. El Patrimonio Cultural y las comunicaciones. Mecanismo para instalar el discurso
de la construcción del Patrimonio en la sociedad............................................................54
4.2. ¿Qué patrimonializa la clase dominante y el Estado proveniente de las clases no
hegemónicas?..................................................................................................................59
4.2.1. El capitalismo, el modo de producción y las prácticas culturales.......................59
4.2.2. El Patrimonio Cultural, el Estado y los pueblos Indígenas.................................63
Capítulo V – El Patrimonio Cultural de la Región de Los Ríos y Las Contradicciones
Culturales. El Patrimonio Cultural desde “arriba” y desde “abajo”.............................66
5.1. La clase dominante de la Región de los Ríos y su pasado. Españoles y Alemanes,
el Patrimonio Cultural desde “arriba”............................................................................66
5.1.2. Los alemanes.......................................................................................................68
5.1.2.1. La colonización alemana del siglo XIX...........................................................68
5.1.2.2. Las políticas de Chile frente a la colonización.................................................70

3
5.1.2.3. La ocupación de los territorios.........................................................................71
5.1.2.4. Los sentimientos escondidos de los inmigrantes.............................................74
5.2. El pueblo Huilliche. La construcción del Patrimonio Cultural desde “abajo”.......77
5.2.1. Su relación con la tierra y el territorio................................................................77
5.2.2. Su Cosmovisión..................................................................................................78
5.2.3. Estructura Familiar. Relaciones sociales y comunitarias....................................80
5.2.4. El comienzo de las pérdidas de tierra Mapuche - Huilliche................................82
5.3. El Patrimonio Cultural de la Región de Los Ríos y la contradicción social a la
hora de establecer una construcción de identidad para la región. (Comunidades
Manquelaf y Quilquilco).................................................................................................85
5.3.1. Comunidad Rural Manquelaf..............................................................................86
5.3.2. Comunidad indígena Quilquilco.........................................................................90
5.3.2.1. La mantención de la comunidad y la resistencia de perder parte de su cultura.
.........................................................................................................................................90
5.3.2.2. Causas que pueden provocar la desaparición de la comunidad.......................93
5.3.2.3. El Patrimonio Cultural y la oportunidad de la mantención y proyección
cultural de comunidades y colectividades. Comunidad Indígena Quilquilco.................96
Conclusión....................................................................................................................98
Bibliografía.................................................................................................................101

4
Introducción.

“Llegamos al siglo XXI con el dilema de asumir que el patrimonio no es solamente un


concepto complejo que nos plantea esencialmente la disyuntiva de la selección de
objetos, de inmuebles, de costumbres, la selección de retazos de historias que nos
heredaremos, sino el hecho de que esa selección también nos pone frente a conceptos
de desarrollo histórico y valoraciones sociales. Aquí se entrelazan tres instancias de la
construcción discursiva: retazos de historias, desarrollo histórico y valoraciones
sociales. Tres instancias inseparables entre sí que posibilitan múltiples lecturas de la
trama de acontecimientos históricos, donde serán las valoraciones sociales –explicitas
o no- las que en el discurso patrimonial marquen el tiempo de la construcción de la
imagen histórica1.

Se proyecta indagar en esta tesis, a partir del estudio de dos comunidades (una
indígena y la otra lo fue alguna vez), primero, como se ha generado los distintos
procesos desiguales en torno a la construcción de la cultura en Chile y como esto afecta
directamente a la construcción del Patrimonio Cultural entendiendo que este concepto
sería el encargado de proyectar el proceso instintivo del hombre de construirse
socialmente para poder “ser” y desplazarse en el mundo a partir de la construcción de
una identidad, y como esta identidad se va construyendo a sí misma en torno al
concepto de memoria, para hacernos la primera pregunta ¿Cómo construir tu identidad
en torno a pasados memoriales distintos entendiendo las imposiciones de poder que se
han generado en torno a la cultura dentro del intento de mantener una estructura social
por parte de las elites?. Por otro lado, se establecerá, la construcción del término
Patrimonio Cultural, entendiendo su peso como originador de control social (que será
revisado con detención), puede ayudar en la emergencia que tiene la desaparición
cultural de antiguas culturas, como seria las comunidades indígenas Huilliches que de
alguna manera, se mantienen en funcionamiento como protector de su cultura, pero que
históricamente las embestidas de los procesos económicos mundiales y nacionales han
hecho que este sector del pueblo Mapuche esté a punto de desaparecer, culturalmente
hablando, dando por finalizada su paso en la historia como un grupo humano especifico

1
Halpert, M.. (2007). Introducción. En Habitar el Patrimonio (p. 7). Santiago de Chile: Ediciones
Universidad Central.

5
en este planeta. Sin embargo, la tarea no es fácil, existen muy pocos estudios en torno al
Patrimonio Cultural ya que su estudio como concepto cultural es muy reciente, a pesar
de que muchos de los conceptos que lo definen han venido siendo trabajados por
historiadores, sociólogos y antropólogos desde hace unas décadas. En lo que respecta a
Chile, los únicos libros que origina una discusión critica sobre cómo se ha tornado
histórica y culturalmente la relación entre los intelectuales y los procesos sociales en
torno al Patrimonio Cultural “Habitar el Patrimonio (2007)”, no obstante, su
preocupación por concebir el espacio y el territorio en su producción cultural estuvo
mas apegada como el sujeto se expresa en el espacio de una manera más plástica, es
decir, en relación con la forma con el objeto, aunque sin desmerecer los buenos
planteamientos en torno al poder y la cultura. Y “Hecho en Chile (2012)”, el cual daría
un punto inicial a los estudios del Patrimonio Cultural como concepto intelectual en
Chile. No obstante, Daniela Marsal (autora y compiladora) establecería dos formas de
cómo el Patrimonio Cultural se ha tornado en Chile, reflejando como este concepto es
mirado de alguna manera mas por la participación que tenga una cultura dentro de la
salida de la pobreza que del resguardo cultural que se debe originar en torno a mi propia
cultura. Por un lado se encontraría la Construcción Patrimonial desde Arriba, la que
generaría control cultural a partir de que está proviene de los interés de la clase
dominante para dominar la formación de la estructura social, como se ha expresado
históricamente, y el intento de conservar el Estado, el cual sería la institución donde
ellos expresan esta situación. Y la Construcción del Patrimonio desde Abajo, la cual
procede, y según Daniela Marsal, “desde lo espontaneo, que nacería desde lo privado,
como las actividades y conocimientos individuales, familiares y de comunidades, que
no son oficializados ni aprendidos institucionalmente… creando identidad y sentido de
pertenencia”2. Lo que realmente busca esta autora en esta parte es que las personas
participen de la construcción de la cultura que será oficializada, pero, ¿Cómo pueden
hacerlo, si las prácticas culturales que provienen “de lo privado”, están sometidas a las
lógicas del poder en cada momento cotidiano de cada individuo y colectivo hoy en dia,
a propósito que la formulación del concepto de Patrimonio Cultural no ha cortado su
pasado controlador de la cultura?; sin embargo, y como aporte al estudio del Patrimonio
Cultural, se puede responder esta pregunta entendiendo el concepto de Construcción de

2
Marsal, D.. (2012). Aproximaciones Críticas al Poder y al Patrimonio. En Hecho en Chile.
Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (p. 101). Santiago de Chile: Ediciones del
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.

6
Patrimonio desde Abajo desde otro punto de vista, el cual se establecería como la
oportunidad que tienen las comunidades o cualquier tipo de sociabilización de conservar
su pasado entendiendo que la importancia de esto, será que no desaparezcan o sigan
desapareciendo formas culturales. En lo que respecta históricamente, muy pocos
trabajos se han dado el tiempo de preguntarse la finalidad y como se ha construido este
concepto históricamente, con lo cual, esta tesis, para efecto de su resultado, expondrá un
intento de reconstrucción histórica para originar el pasado del Patrimonio Cultural en
Chile y sus efectos en la sociedad.

Pues bien, para entrar en esta discusión es necesario entender, primeramente, que se
entiende por territorio, concibiendo que dentro de un territorio dado, el humano se va
moldeando culturalmente, y que dentro de un territorio dependiendo de quienes se
encuentre habitándolo será la relación que tendrá con él, no obstante, el problema se
genera cuando un espacio territorial es habitado por más de una sociabilización,
originarias o allegadas posteriormente. Se puede mencionar específicamente que dentro
del territorio que esta tesis se encuentra su estudio, existen dos formas culturales
predominantes en la historia del lugar. La primera converge de los rasgos provenientes
de la cultura pre – moderna, es decir, antes de la llegada de los españoles. Y otra, que se
ha considerado como moderna, que se ocasiona a partir del establecimiento de nuevas
Representaciones de Poder modificando la estructura social de las culturas pre –
modernas, integrándolos al sistema que predomina una clase hegemónica, la cual paso
de ser un territorio natural a un territorio llamado rural. En el caso de América y
específicamente en Chile, fue el sistema de hacendados e inquilinaje el cual ha
predominado toda la historia de este territorio.

Bajo el efecto de esta tesis, y comprendiendo la centralidad que tienen las políticas
regionales hoy en día en la dirección de todos los ámbitos (económicos, políticos,
sociales, etc.) a escala local (al servicio de las clases hegemónicas locales), se hace
indispensable estudiar el Plan de Desarrollo Regional el cual tras diferentes
planteamientos generados por los encargados de aprobar el plan de desarrollo y
posterior puesta en acción de dicho plan, se ha establecido la dirección de la identidad
con que deben contar los habitantes de la región frente al mundo capitalista.

7
Ahora bien, ¿Por qué hacer este estudio en la Región de Los Ríos mas allá de que las
comunidades a estudiar se encuentren en ella?, es porque es un ejemplo general,
primero, de cómo se construye el territorio a partir de las relaciones sociales entre
aborígenes y extranjeros. Segundo, de cómo en sus tierras han pasado los procesos más
importantes de la historia chilena en torno a los conflictos generados por el interés de
clases de los sectores dominantes de cada momento histórico. Y tercero, de cómo hoy en
dia, se han mantenido las lógicas de dominación, a propósito de que esta región
comienza a existir como tal el año 2007 (posterior al esfuerzo de la clase dominante
local de crear esta instancia), han direccionado nuevamente la construcción de la
identidad, en vez de resguardar las que aun existen proveniente de los que han estado
por mucho más tiempo. Por esta razón, es mucho más conflictiva y contradictoria la
formación de la imposición de identidad cultural de los habitantes de esta región y
sobre todo, de los habitantes Mapuches - Huilliches, ya que ellos no tienen idea de este
plan regional, por ejemplo, y por sobre todo, por que las líneas con que este plan han
establecido la construcción de la identidad cultural regional, para la creación y posterior
conservación de un Patrimonio Cultural de la Región, proviene desde los pasados de los
invasores europeos, es decir, alemanes y españoles, quienes en su defecto, son el pasado
minoritario del territorio en estudio.

Metodológicamente hablando, primero, se generó la necesidad de entremezclar la


microhistoria o historia local con una historia más macro proveniente de procesos y
fenómenos históricos nacientes a las intromisiones e interés propio de las nociones
imperialistas y capitalistas, primeramente Inglaterra (siglo XIX) y posteriormente de
EE.UU. (siglos XX y XXI), que fueron configurando hoy en dia el mundo, aquel mundo
que Wallerstein estableció como el Sistema – Mundo3. Como técnica principal para esta
invetigacion se utilizara la Cualitativa, la cual “se refiere en su más amplio sentido a la
investigación que produce datos descriptivos: las propias palabras de las personas,
habladas o escritas, y la conducta observable… consiste en más que un conjunto de
técnicas para recoger datos. Es un modo de encarar el mundo empírico” 4. Ahora bien,
como método específico cualitativo de la disciplina histórica se establece primeramente
el método analítico el cual, En historia sería el manejo de las fuentes escritas y orales

3
Wallerstein, I.. (2006). Análisis de Sistema – Mundo. México D.F: Editorial Siglo XXI, ,
4
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 20). Barcelona, España: ed. Paidós.

8
principalmente”5. Por otro lado, otro método se hace necesario frente a una
investigación histórica el cual se refine al procedimiento de síntesis, el cual es llamado
como el método hermenéutico y “que consiste en el arte y teoría de la interpretación,
que tiene como fin aclarar el sentido del texto partiendo de sus bases objetivas
(significaciones gramaticales de los vocablos y sus variaciones históricamente
condicionadas) y subjetivas (propósitos de los autores)”6.

Por otro lado, esta indagación histórica también utilizara las técnicas invetigativas
llamas deductiva e inductiva. Por el lado deductivo “se emplea para nombrar al método
de razonamiento que lleva a la conclusión de lo general a lo particular” 7. E inductiva
porque, “es necesario también estudiar los hechos singulares a las proposiciones
generales, o sea de lo particular a lo general”8, utilizando ambos para esta tesis. Como
mecanismo de autenticidad de la información dentro del análisis de fuente, se propone
la crítica externa como interna, externa para saber si son auténticos y genuinos como
información relevante, y la interna, para determinar el grado de exactitud y merito que
la fuente pueda aportar.

Ahora bien, y en lo que respecta a la cultura de los Huilliches se utilizara la entrevista


cualitativa (historia oral) la cual es entendida como una entrevista, “flexible y dinámica,
descritas y no directivas, no estructuradas, no estandarizadas y abiertas. Estas
entrevistas siguen el modelo de una conversación entre iguales, y no de un intercambio
formal de preguntas y respuestas”9. No obstante, se establece una diferencia al decir
que las entrevistas serán semi estructuradas, por que buscaran introducirse en la
memoria de las personas y en el entendimiento de sus propios procesos de vida, por lo
que se necesita de alguna u otra forma guiar la entrevista donde se entenderá que los

5
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 10). Barcelona, España: ed. Paidós.
6
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 11). Barcelona, España: ed. Paidós.
7
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 11). Barcelona, España: ed. Paidós.
8
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 12). Barcelona, España: ed. Paidós.
9
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 20). Barcelona, España: ed. Paidós.

9
testimonios recogidos serán respetados como los que “constituyen las fuentes orales y
le siguen a la escritura en importancia, sin embargo, es necesario repetir que no bastan
estas últimas como únicas fuentes para escribir la historia, ellas en muchas
oportunidades sirven de guía para la búsqueda de los documentos imprescindibles.
Siempre se citan las memorias de los participantes en hechos históricos como los
testimonios de más valor, pero para que esto sea cierto es preciso que esas narraciones
tengan como base diarios de actividades escritos cuando se producían los hechos y la
consulta de fuentes escritas”10. De esta manera, la entrevista es “una técnica social que
pone en relación de comunicación directa cara a cara a un investigador/entrevistador y
a un individuo entrevistado con el cual se establece un relación peculiar de
conocimiento que es dialógica, espontánea, concentrada y de intensidad variable11”

Por último, también se proyectó esta tesis en la indagación de la técnica de


investigación de Acción la cual se orienta en la búsqueda de transformar la realidad, a
partir del análisis de las prácticas sociales y culturales, además se articula desde el
estudio de la formación del proceso por lo que se considera motor de cambio generada
desde la investigación.

Por consiguiente, el cuerpo de esta tesis se ha dividido en cinco capítulos. El primero


de ellos aborda los antecedentes que ayudarán a comprender de mejor manera la
construcción territorial de la Región de Los Ríos y como ésta se relaciona con la
construcción patrimonial. En un segundo capítulo se desarrollan las distintas
concepciones teóricas que se han originado dentro de las discusiones que conformar el
Patrimonio Cultural, además, de revisar cómo los conceptos de identidad y memoria
están estrechamente relacionados con la construcción cultural y social de una
colectividad.

En el tercer capítulo se exhibe cómo se ha instituido la noción de Patrimonio Cultural


en la sociedad Chilena y cómo esta se ha relacionado con los distintos procesos
históricos que ha afrontado Chile, resaltando la necesidad que han tenido las clases

10
Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de Investigación. La
Búsqueda de Significados (P. 14). Barcelona, España: ed. Paidós.
11
Gainza, Á.. (2006). La entrevista en Profundidad Individual. En Metodologías de Investigación Social
(pp. 219 – 220). Santiago de Chile: Lom Ediciones.

10
dominantes para la legitimación de su proyecto histórico, comenzando con la
construcción del Estado – Nación y siguiendo con los movimientos económicos,
industriales y las políticas de Estado, las cuales en estrecho entorno a la
Institucionalidad, normativas y el proceso de patrimonialización que el Estado de Chile
ha establecido ¿en? su dominación.

En el cuarto capítulo, se desarrollan los diferentes mecanismos de control que la clase


dominante y el Estado utilizan para ejercen la hegemonía cultural, y cuáles serían los
pasados aceptados para patrimonializar desde el Estado de Chile.

El último capítulo, está directamente relacionado con el planteamiento de la existencia


de un Patrimonio Cultural desde Arriba y un Patrimonio Cultural desde Abajo,
específicamente dentro del territorio de la región de Los Ríos, además, de revisar lo
relacionado con las comunidades estudiadas, a propósito de la pérdida cultural que se
tiene y mantendrá si es que no se dispone una manera distinta de concebir el Patrimonio
Cultural.

Para finalizar, se exponen las conclusiones y los desafíos que los estudios
patrimoniales, en torno a la comprensión de cómo se conforma el Patrimonio Cultural,
tiene que tener para comenzar a trabajar con la pérdida de la identidad, de la cultura y de
su estructura social, por parte de quienes han estado a la sombra de los intereses de la
clase hegemónica.

11
Capítulo I - Antecedentes de la Investigación.

1.1. El nacimiento de la Región de los Ríos y la conformación de lo que será


considerado como Patrimonio Cultural.

Como mencionamos, la XIV Región de los Ríos se crea el año 2007, sin embargo, y
bajo su proceso de formación no estuvo extenso de pequeños inconvenientes
burocráticos, debido a la existencia del numeral “13” en el Artículo Nº 45, “que hacía
referencia a la cantidad de regiones en el país, y a la ausencia de la palabra
“regiones” en el Artículo Nº 99”12. Posterior a esto el año 2005 el Senado Promulga la
reforma constitucional a la Ley Nº 20.050, la cual borraba la cantidad de números de
regiones dejando abierto la creación de nuevas regiones posteriormente. Valdivia se
convirtió en la capital regional de la nueva región, y es sensato ya que es la ciudad con
más movimiento económico. Por lo tanto, ya creada la región, el Estado Central
establece que cada región tiene que tener un CORE (Consejo Regional), el cual proyecte
la región hacia el futuro. De esta forma, se comenzó con la confección de la Estrategia
Regional de Desarrollo (ERD)13, la cual fue efectuada bajo, supuestamente, la
participación ciudadana a partir de la “…implementación de Procesos de Planificación
Territorial Participativa… ejecutada por el Programa Eco-Región Agenda Local 21
(2008); y los Planes de Desarrollo Comunal (2007-2009)”14, la cual generaba que
organizaciones pertenecientes a los municipios, tales como juntas de vecinos, pudieran
tener algo que decir. Así las autoridades de la región conocieron la realidad que tenia
este nuevo territorio administrativo. De manera, que para el año 2009 ya se tenía listo la
ERD de la región la cual se pondría en marcha de ese año hasta el año 2019. En la parte
técnica metodológica se contrató al Economista Sergio Boisier, experto en planificación
y desarrollo regional con una extensa trayectoria internacional. Este economista
perteneciente a la Escuela de Geografía de la Universidad Católica de Chile, estableció
que las preocupaciones para la conformación de la región debían establecerse bajo una
serie de instancias las cuales serán expuestas a continuación.

12
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 12). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.
13
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 12). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.
14
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 13). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.

12
- Una creciente autonomía decisoria por parte de la región, que posibilite la
elección de estilos de desarrollo y la aplicación de los instrumentos correspondientes a
ello.
- Un proceso creciente de capacidad de captación y reinversión del excedente
económico de la región, que permita sustentar en el largo plazo al propio crecimiento
regional, mediante la paulatina diversificación y ampliación de su base económica.
- Una creciente inclusión social, entendiendo por ello una mejoría sistemática del
patrón regional de distribución del ingreso, así como la organización de instituciones
formales, que viabilicen la participación de la población en el sistema político de toma
de decisiones de la región.
- Una creciente conciencia ecológica y de responsabilidad colectiva con respecto
al medio ambiente, calidad de vida y explotación de recursos, que preserve el medio
natural regional.
- Una creciente sincronía intersectorial y territorial en el modo de expansión
económica de la región, de manera de difundir los efectos del crecimiento, sobre todo,
en el espacio regional. Esta sincronía hace referencia a un cierto balance en el
crecimiento de los distintos sectores, así como a una adecuada distribución del
crecimiento y de la población en el sistema de centros poblados de la región.
- Una creciente percepción de pertenencia a la región, de identificación con su
“ser” y con su “devenir”, basada en la exploración sistemática de una cultura
histórica y en la cristalización de un proyecto político regional, cohesionador y
movilizador”.

Resalta a la vista en este planteamiento la inclusión primeramente, del Modelo Centro


– Periferia apostando al Capitalismo como motor histórico, además, de establecer los
crecimientos de los sectores urbanos, como una forma necesaria para poder reproducir
el neo – liberalismo en la sociedad. Contrariamente, se ha dispuesto la conservación de
los recursos naturales porque es sabido que las grandes extensiones vírgenes de la
región provienen de los sectores oligárquicos derivados de los grandes fundos, que
siguen manteniendo por lo demás, a campesinos/inquilinos que les sirven, como
antiguamente se solía ser.

Por otra parte, el CORE impulsó tres planes para que se cumpliera la ERD, ellos son
los siguientes: los Planes de Ordenamiento Territorial (POT), los Planes de Desarrollo

13
Comunal (PLADECOS) y los Planes de Desarrollo Territorial (PDT). Cada uno en
estrecha comunión con los intereses de las clases gobernantes las cuales se preguntaban
¿Dónde estamos?, ¿Para dónde vamos?, ¿Qué otras alternativas tenemos de futuro?,
¿Futuro deseable?, ¿Hacia dónde queremos ir?, y ¿Cómo podemos construir desde
ahora el futuro que deseamos?15

Por consiguiente se formulo una serie de realidades las que llevó al análisis con que la
región quería mostrarse al mundo a futuro, es decir, una especie de pacto de dominación
entre todas las clases dirigentes. Se plantearon, el primero se le llamó Escalera Real, y
tiene que ver con el mejoramiento de la educación para la inclusión de la población a la
necesidad que hoy en día tiene el Capitalismo y en breves palabras; tener obreros
calificados. El segundo, se planteó como El Regreso de los Cisnes, proyectando a la
región en la búsqueda de generar circuitos turísticos capaces de competir con otras
regiones, hoy en dia, principalmente los circuitos creados a partir de esta acción, La ruta
de los Siete Lagos y la ruta de Valdivia Costera. El tercero es la Ciencia a la Carta, la
cual se presentó para el mejoramiento de las tecnologías productivas de la región siendo
la Universidad Austral de Chile (UACH), quien ha tomado esta misión, así desde el
2007, ha impulsado grandes desarrollos tecnológicos tanto regional como
nacionalmente, y de esta manera la región obtuvo una mayor participación en la
economía mundial. La cuarta es, Los Territorios Emergiendo, precisando en los recursos
no explotados de la región en función de los propósitos económicos, de manera que se
debilitó a la familia campesina para que emigrarán a las ciudades, y así, poder ocupar
esos terrenos en otra actividades más productivas, además, de llevar personas a trabajar
en las faenas que la Burguesía ha creado en las ciudades. De manera que es muy fácil
ver como lugares a “orilla de rio”, que antes eran de familias, ahora son ocupados por
pisciculturas las cuales contaminan las aguas con la cría de salmones. El quinto se
llamó, El Bosque nos Rodea, se crearon planes de conservación en la región de sectores
naturales pertenecientes a los dueños de los grandes suelos, como se dijo anteriormente,
adulterando la visión y cotidianidad de los sectores campesinos, ya que es muy fácil
observar como las grandes forestales, tales como la Mininco o la Valdivia, operan
indiscriminadamente, como abejas hambrientas por sustraer la madera de los bosques,
provocando el deterioro de los suelos de la región. El penúltimo se le llamó, Todos los
15
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 38). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.

14
Ríos llegan a Valdivia, el cual instituye cómo el sector privado es quien tiene las riendas
de la economía de la región a partir de la actividad turística, además, de los grandes
fundos. Por último, se habla de los Perdidos en la Niebla, y muestra como el sector
público no fue capaz de tomar las riendas de la economía de la región. Suena extraño
esto, proviniendo de un instrumento creado supuestamente por el sector público 16. De
este modo, se puede dejar entre ver cómo la clase dominante local, está detrás de todo
esto, ya que de esta manera, los puso en la creación y posterior dirección del proyecto
histórico con que la región se enfrentará hasta, como se ha visto), el año 2019.

Posteriormente a lo anterior, se dispuso crear los lineamientos estratégicos con que la


región constaría, las cuales fueron establecidos y son: Administración Pública Regional
Moderna, Inclusión Social y Calidad de Vida, Educación, Salud y Protección Social,
Desarrollo Territorial Integrado y Sustentable, Protección y Promoción de Identidad
Patrimonial, Economía Regional: Capital Humano, Asociatividad e Innovación, Gestión
y Cooperación Internacional. Por efecto de la tesis solo analizare la que nos
compromete; la Protección y Promoción de Identidad Patrimonial, la cual se ha
planteado como el hilo conductor de la cultura y de la construcción de la identidad con
que la Región de los Ríos contará. Se instauró, entonces, formar un instrumento que
ayudará a la conformación de lo que sería considerado Patrimonio Cultural en la Región
a partir un diagnostico general. Este fue encargado principalmente a la Universidad
Austral de Chile la que comenzó con la generación de información de la cantidad de
objetos culturales que pueden ser considerados como Patrimonio Cultural. Así, para el
año 2010 se hacía entrega el “Diagnostico del Patrimonio Cultural, Programa Puesta
en Valor del Patrimonio”, con el cual se identificaba la cantidad de patrimonios
culturales activados y por activar pertenecientes a la región, tanto material como
inmaterial, reconociendo la existencia de 1.433 bienes culturales los cuales y siguiendo
a este documento, “el propósito de abordar y hacernos cargo de esta diversidad y
complejidad, es porque concebimos el patrimonio cultural como un recurso o factor de
desarrollo17. De tal manera, se estableció que la mayoría de bienes patrimoniales
provendrían desde lo material y específicamente desde lo arquitectónico (66%),
siguiendo lo arqueológico (18%), continuando lo inmaterial (11%) y terminando con el
16
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (pp. 41 - 48). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.
17
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 22). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.

15
indígena (5%)18, siendo en la ciudad de Valdivia que concentra la mayor cantidad de
Patrimonio Cultural de la Región de los Ríos (El 34% de los 66% de lo que proviene de
lo arquitectónico). Por otra parte, se ha ligado, generalmente, los bienes patrimoniales
inmateriales activados a los inmuebles que se encuentran en distintos lugares, siendo los
de pasado español y alemán los que más se han activado 19. Ahora, extrañamente, este
5% que es considerado como Patrimonio Cultural proveniente del pueblo Huilliche, se
contrapone con la ocupación de territorios Huilliches. Primero, se establece que el
sector indígena que ha recibido tierra desde el Estado (las llamadas Tierras Indígenas
Privadas) ocupa el 38% de las tierras de la región, y las tierras aun pertenecientes a
comunidades son el 15%. De esta manera, el territorio total Mapuche, considerando que
el sector que ha recibido tierra trata de alguna manera de mantener algunas tradiciones
primordiales, sería de un 53 %, es decir, más de la mitad de la tierra pertenecería a los
mapuches, siendo el otro 47% correspondiente a los privados y al sector público. Por
otro lado, lo que se ha considerado como Patrimonio Cultural proveniente de los
mapuches son principalmente los de carácter ceremonial y funerario (en conjunto el
92%) estableciendo de menor grado a los aportes educacionales y habitacionales (un
8%)20 como lo Patrimonio Cultural, de manera tal, se deja entre ver como lo que se
considera patrimonio proviene de la mezcla cultural entre este pueblo y los extranjeros
generando contradicciones sustanciales a la hora de ingeniar la construcción de la
identidad con que la región quiere que sus habitantes se casen. De esta forma, nacen las
siguientes preguntas: ¿Por qué se establece por lo tanto la relación de lo que es
considerado patrimonio para la región?, ¿realmente las tierras que se consideran como
mapuches concentran esta cantidad territorio?, ¿Por qué el pasado español y alemán, y
la mescolanza de este último con el mapuche son los pasados elegidos para
patrimonializar?, estas preguntas serán respondidas a medida que la tesis tome forma.

18
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 41). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.
19
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 43). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.
20
Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional de Desarrollo de la
Región de Los Ríos 2009 – 2019 (p. 97). Valdivia, Chile. Trama Impresores S.A.

16
Capítulo II – Concepciones Teóricas.

2.1. Concepciones básicas del Patrimonio Cultural.

Para comprender cómo el Patrimonio Cultural se torna un Mecanismo de Control en la


Sociedad, y específicamente en la Región de los Ríos a la hora de comenzar hablar de
de alguna solución para la construcción del Patrimonio Cultural de esta región, primero,
se debe entender los debates y teorizaciones que se han presentado en torno al concepto
de Patrimonio Cultural. Muchos estudiosos de las Ciencias Sociales han teorizado sobre
la relación de cómo se van originando ciertos símbolos que nos van arraigando a ideas o
espacios definidos, en respuesta de nuestra construcción social de la identidad y desde
nuestra propia interpretación de aquella construcción de la realidad que nos va dando
significado en este mundo. Se ha llegado a afirmar que esta acción es un Instinto
Humano, ya que va actuando sin que nosotros nos demos cuenta en realidad. Por
ejemplo, algunos lugares visitados cuando niño, algunas historias contadas por los
padres o abuelos, algún objeto que te agrada mucho o que te ha durado por mucho
tiempo, va fundando que se haga parte de ti y que te vaya dando una identidad que
intente reflejar lo que has experimentado. Algunos estudios de esto último, han dicho,
que el sujeto ha estado de dos maneras en el mundo, una a través de lo sagrado y otra a
través de los profano21. Bajo esta lógica, se establece que existe una época más alejada a
la historia donde el individuo se caracteriza, entre otras cosas, por la relación inmediata
con el origen divino o sagrado de las cosas. Dentro de la relación primordial el hombre
originaba lo no explicable con la divinidad, y se veneraba el sol, el aire, la luna, el rayo,
y todos los otros fenómenos de la naturaleza, que el hombre no entendía y fue
optándolas como cosas sagradas. Posteriormente lo divino pasó a ser visto como una
manera de controlar a las comunidades o sociedades por quienes se dieron cuenta que de
esta manera lograrían darles origen privilegiado y poder, y estar sobre otros, ya que
podrían decir que provenían directamente de lo sagrado. Esta relación originó el fin de
ver el mundo como sagrado y pasó a ser la etapa de lo profano, donde un sector
controlaría las tendencias de la sociedad. Por ejemplo, de ahí que las realezas o
monarquías lograban ser validadas ante el pueblo, ya que ellos tenían el vínculo divino,
por eso serán quienes dirigirán al pueblo sin una movilidad social. Eliade dice, que a
21
Eliade, M.. (1998). Lo Sagrado y Lo Profano. Barcelona, España: ed. Paidós.

17
pesar de que lo profano se impuso sobre lo sagrado, este último no ha desaparecido,
sino que desde una exteriorización primitiva, se había interiorizado y repitiéndose,
porque es parte de la esencia misma del humano. Continuando, tanto Freud y Jung han
hablado sobre este instinto humano, a partir de la presencia de un inconsciente
colectivo. La importancia de los ancestros y todo lo del pasado durante el pasado
mismo, a propósito de la interiorización de lo ritual y de lo sagrado, establecerían que el
inconsciente necesita darle significado a objetos y prácticas culturales que nos den
seguridad y así no caer en conflictos con la constante modificación del exterior.

A raíz de esto la clase dominante ha tomado ventaja, aprovechándose de su poder, ya


que al dar ellos los objetos patrimonializados, desarraiga y deja de lado que surja como
resultado ese acto natural, el mismo ser entraría en conflicto consigo mismo.

Desde la Sociología, Bourdieu ha construido una serie de conceptos que a partir de las
relaciones sociales relacionadas con este “instinto humano”, generaría el poder del
sector dominante de la sociedad, quien controlaría, además, la estructura social a
propósito de la relación que esto tendría, supuestamente, con la Función Social del
Patrimonio Cultural hoy en día y el proceso hegemónico. De tal forma, el primer
concepto que se nos presenta es el Habitus22, quien establecería cual es el espacio donde
confluye la producción, distribución, intercambio y uso (utilidad, a partir del
Capitalismo) de aquellos bienes que se han identificado con anterioridad como
significantes. Las dinámicas que se presentan dentro del Campo son tres, la Cultura, la
Memoria y la Identidad, conformando más tarde, como serán las políticas con que se
entablarán las maneras de patrimonializar las prácticas culturales y objetos por parte del
Estado. Bajo esta mirada, Bourdieu establece que es a partir de la confrontación que se
articula la legitimidad del poder frente de los distintos campos, siendo las clases
dominantes quienes ejercen presión en los campos para su configuración. De tal manera
Bourdieu percibe que en las estructuras simbólicas o habitus no se encuentran inmersos
libremente, sino que conceden "una dimensión de todo poder, es decir, otro nombre de
la legitimidad, producto del reconocimiento, del desconocimiento, de la creencia, en
virtud de la cual las personas que ejercen la autoridad son dotadas de prestigio"23.

22
Bourdieu, P. (2001). Capital Cultural, Escuela y Espacio Social. México D.F.: ed. Siglo XXI.
23
Bourdieu, P. (1990). Sociología y Cultura (P. 93). México D.F.: ed. Grijalbo.

18
Por otra parte, este autor establece el concepto Campo Patrimonial el cual “se define,
entre otras formas, determinado lo que está en juego y los interés específicos, que son
irreductibles a lo que se encuentra inmersos del mismo campo, interactuando con otros
campos (no será posible a traer a un filosofo con lo que es motivo de disputa entre
geógrafos) y que no privará alguien que no haya sido construido para entrar en ese
campo (cada categoría de interés implica diferencia hacia otros interés, otras
inversiones, que serán percibidas como absurdos, irracionales, o sublimes o
desinteresados). Para que funcione un campo es necesario que haya algo que implican
el conocimiento y reconocimiento de las leyes inmanentes al juego, de lo que está en
juego, etc.”24, queriendo decir que, el campo patrimonial en donde se desarrollan las
distintas actividades en torno a lo que se relaciona con lo cultural y la construcción
social de las personas. De tal manera, es donde se encuentran las capacidades de dotar a
algo de sentido, siendo común dentro de los que se hacen parte de una comunidad o
sociedad dada o en constante transformación, es así como también, el campo
patrimonial es en el que se entremezclan los distintos actores de la estructura social
generando los distintas conciencias de clases y construcciones simbólicas dependiendo
de cada sector. Por consiguiente, tanto los habitus y los campos patrimoniales son
definidos por los distintos tipos de capital, tantos materiales como simbólicos. Estos
capitales, a parte del capital económico, están formados por el capital cultural, el capital
social, y por cualquier tipo de capital que sea percibido como natural, formando un
nuevo concepto llamado capital simbólico. Bourdieu plantea“A lo largo de la historia,
el campo científico y artístico, han acumulado capital respecto del cual actúan dos
posiciones: la de quienes detentan el capital y la de quienes aspiran a poseerlo [...].
Quienes dominan el capital acumulado, fundamento del poder o de la autoridad de un
campo, tienden a adoptar estrategias de conservación, y así mantener su hegemónica
cultural”25.

Entonces, el Capital Simbólico es la capacidad de los sujetos de dotar de valor a los


objetos y prácticas culturales bajo procesos de connotaciones simbólicas y que pueden
terminar por conformándose en patrimonio, es decir, este autor configura este concepto
para establecer los campos donde el poder distribuye, otorga y reitera la legitimación de
sus propósito culturales frente al sector dominado. Se ha dicho que existen dos tipos

24
Bourdieu, P. (1990). Sociología y Cultura (Pp. 135 - 136). México D.F.: ed. Grijalbo.
25
Bourdieu, P. (1990). Sociología y Cultura (P. 93). México D.F.: ed. Grijalbo.

19
distintos de capital simbólico el Objetivado y el Difuso26. El primero es aquel Capital
Simbólico que genera el Estado, lográndolo bajo la creación y legislación de leyes y
decretos. Este tipo de capital ha sido entablado para la generación del Nacionalismo,
práctica con que cuentan los estados para poder mantener unida a una población en un
territorio determinado, un ejemplo de lo anterior es la consideración como patrimonio
que se tiene de los grandes edificios construidos bajo la explotación de obreros en el
siglo XIX, como por ejemplo, el Palacio Cousiño, ubicado en la Ciudad de Santiago de
Chile, palacio que demuestra cómo las familias de este siglo preferían las tendencias
francesas en la decoración de sus casas, resaltando su fascinación oligárquica por los
gustos aburguesados europeos. Por otra parte, se encuentra el Capital Simbólico Difuso,
y es aquel que generan las comunidades, identidades locales, es decir, los sectores
dominados. Este tipo de capital tiene que ver con las prácticas culturales que se dan en
espacios reducidos donde habitan personas y que ellos mismos consideran ser
netamente diferente a todas las otras prácticas culturales, por lo que este tipo de capital
busca diferenciar a una comunidad con otra mediante procesos históricos, sociales y
culturales, bajo la necesidad de entablar una identidad que los una bajo un proyecto en
común, fundando una memoria única, tanto colectiva como individual.

Esto tipo de capital se encuentran en comunidades que quieren hacer que sus prácticas
culturales sean reconocidas por otros, pero es el poder del estado quien termina por
validar este tipo de capital, por lo tanto, no todos los capitales simbólicos difusos son
patrimonializados. Un ejemplo de esto, son los movimientos locales culturales de
poblados que vivieron el maremoto en Valdivia, y que bajo intentos de reconstrucción
memorial, hoy en día han logrado resaltar históricamente su pasado frente a tal cruel
desastre, como en el año 2010 en el Barrio La Aguada, en Valdivia 27. No obstante y
como veremos más adelante, esta ultima concepción entra en aprietos al momento de
expresar que las prácticas culturales nacientes que se intentan patrimonializar desde esta

26
Alegría Luis. (2012). Patrimonio, Museos y Museología. En Hecho en Chile, Reflexiones en torno al
Patrimonio Cultural (p. 151). Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
Andros Impresores.
27
Schwerter L. & Basso Zapata, I.. (2010). Reconstrucción de la Memoria Histórica del Barrio La
Aguada (1906 – 2010). Unidad de Comunicaciones Consejo de Cultura y de La Artes, Región de Los
Ríos, Trama Impresores S.A.

20
concepción se han olvidado de interpretarlas desde los modos de producción capitalistas
que se han inmerso.

Dejando atrás los conceptos de Bourdieu es sumamente importante desarrollar el


proceso que se ha ocupado para establecer lo que es Patrimonio o no, proceso al que se
ha llamado Patrimonialización. Siguiendo a Luis Alegría, este concepto se establece
como un proceso que es generado por los sujetos que viven socialmente, siendo ellos
quienes le dan un valor a los objetos o prácticas culturales que terminan por convertirse
en un patrimonio. Si bien, todo objeto o practica puede ser considerada patrimonio
dentro de una comunidad local, pero para que éste se convierta en patrimonio regional o
nacional, es el poder, o más bien, la función del Estado, la que está al servicio de la
clase dominante, quien termina por considerar si ese objeto o practica cultural es
considerada patrimonio, de manera que es el poder quien decide lo que es y/o será
Patrimonio Cultural28.

Un siguiente concepto se nos presenta y está referido directamente a como se


construye un discurso que debe ser reproducido culturalmente en la sociedad y que se
remite a la idea de universos simbólicos legitimados por la sociedad dominada
hegemónicamente. Se constituye entonces el concepto de invención, el cual fue
desarrollado inicialmente por Berger y Luckman29, quienes dicen que a partir del sentido
común, conocimiento básico, ya que proviene desde la experiencia de lo cotidiano, se va
derivando y manteniendo a partir de la intervención de las interacciones sociales, es
decir, cuando las personas interactúan van absorbiendo parte de una realidad, como esta
realidad social es creada, este sentido común se va moldeando a la necesidad que la
construcción de la sociedad depositó en aquella persona que pertenece a un sector
especifico en la estructura social. Posteriormente LLorent Prats, nos habla nuevamente
señalando que “La invención se refiere sobre todo a procesos personales y conscientes
de manipulación, mientras que la construcción social se asocia principalmente con
procesos inconscientes e impersonales de legitimación… en cualquier caso, la
invención, para arraigar y perpetuarse, necesitará “convertirse” en construcción
28
Alegría Luis. (2012). Patrimonio, Museos y Museología. En Hecho en Chile, Reflexiones en torno al
Patrimonio Cultural (p. 152). Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
Andros Impresores.
29
Berger, p. & Luckman, T. (1983). La Construcción Social de la Identidad. México D.F: Amorrortu
Editores.

21
social, es decir, alcanzar un mínimo nivel de consenso”30. Por consiguiente, nuevamente
Berger pero ahora con Hobsbawm31, estableció que esta invención y su construcción se
ha dado por la conformación de una tradición inventada que implica que un grupo de
prácticas, normalmente gobernadas por reglas aceptadas, abierta o tácitamente, y de
naturaleza simbólica o ritual, buscan inculcar determinados valores o normas de
comportamiento por medio de la repetición, lo cual implica automáticamente
continuidad con el pasado. De hecho, cuando es posible, normalmente intentan
conectarse con un pasado histórico que les sea adecuado anulando muchas veces la
realidad histórica.

Bajo la misma lógica anterior, y a lo que respecta al Patrimonio Cultural más


específicamente dentro de su función real dentro de la sociedad, Daniela Marsal nos
comenta: “Que son… los grupos de poder hegemónicos que ostentan el poder,
específicamente el poder político, económicos y sociales, quienes juegan un rol clave a
la hora de construir patrimonio, por lo que reconocerlos nos permite tener una
compresión más acabada y completa en la construcción social de este” 32. Por otra parte,
Florescano denuncia que los grupos dominantes son quienes hacen “la selección de
bienes y testimonios culturales… de acuerdo a sus criterios y valores no generales, sino
restrictivos o exclusivos33”.

De esta manera se establece que el Patrimonio Cultural y el proceso de


patrimonialización están dirigidos por la clase hegemónica para mantener su proyecto
histórico en pie. Bajo esta lógica, Daniela Marsal, dice que pueden existir patrimonio
alejados del poder, en contra del poder y carente de poder, no obstante, para que exista
este patrimonio al margen del poder, para ser reconocido, legitimado y visualizado en
niveles más amplios, es decir, para que se tomen medidas de conservación, es necesario
vincularlo a algún tipo de poder, por lo que realmente sin poder no hay patrimonio,
30
Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio (p. 20-21). Barcelona, España: ed. Ariel S.A..
31
Hobsbawm, Eric & Ranger, Terence. (2002). La Invención de la Tradición. Barcelona, España: ed.
Crítica,
32
Marsal, D.. (2012). Aproximaciones Críticas al Poder y al Patrimonio. En Hecho en Chile,
Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (p. 96). Santiago de Chile: Ediciones del
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
33
Florescano, E. (1993). El Patrimonio Cultural de México (p. 9). México D.F.: Consejo Nacional para
la Cultura y Arte. Fondo de Cultura Económica.

22
haciéndome parte de lo que postula LLorent Prats 34. De esta forma, lo que el grupo
dominante considera Patrimonio Cultural será impuesto sin lugar a duda en una
arbitrariedad cultural por lo que y según Bourdieu esto nace a propósito de la violencia
simbólica a partir de la apoderación del capital simbólico. Para este autor la violencia
simbólica implica que todo poder que logra imponer significaciones e imponerlas como
legítimas disimulando las relaciones de fuerza en que se funda su propia fuerza
propiamente simbólica a esas relaciones de fuerza35. De manera tal, el “Estado y los
grupos dominantes, han actuado como los filtros sociales que ejecutan la tarea de
selección y transmisión simbólica de acuerdo a intereses propios y en exclusión de
otros”36.

De esto nace la pregunta ¿es necesario realmente vincular a organizaciones sociales


que están fuera de la lógica del poder con el poder para que su memoria y legado
simbólico generacional sea reconocido por ellos mismos y por otros?, esta pregunta será
abordada con mas detención.

Por consecuencia, y posteriormente a este pequeño análisis, se hace imposible no


comprender que la construcción de lo que hoy en día es Patrimonio Cultural en Chile,
no provenga de movimientos mundiales, a propósito de la economía implantada a nivel
global a partir del final del siglo XIX.

Es sumamente primordial establecer la forma con que el mundo se ha proyectado, y


para ello es sumamente importante tener la concepción (a pesar de que en muchos
trabajos patrimoniales ni se menciona) del sistema – mundo que Wallerstein origina,
instaurando la existencia de países céntrico y países periféricos los cuales tienen una
función especial dentro de la estructura económica mundial. De comienzo, los
conceptos de Centro y Periferia, no fueron propuestos por Wallerstein, fueron
formulados inicialmente por Raúl Presbich en 1950, dentro de la Teoría de la
Dependencia, para analizar la diferenciación global. “Las regiones de la Periferia eran
aquellas que cumplían un rol periférico en la producción, sus economías estaban

34
Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio (p. 27). Barcelona, España: ed. Ariel S.A..
35
Bourdieu, P. & Passeron, J. (1995). La Reproducción, Elementos para una Teoría del Sistema de
Enseñanza (p. 44). México. D.F.: ed. Fontamara.
36
Rabi, Salim. (2007). Habitar ¿Cuál patrimonio?. En Habitar el Patrimonio (p. 142). Santiago de
Chile: ed. Universidad Central.

23
dirigidas a la exportación, al flujo de sus recursos hacia las regiones del Centro. Éstas,
ostentaban el desarrollo industrial y producían manufacturas altamente elaboradas
gracias a las materias primas y recursos que provenían de la Periferia, y gracias al
monopolio de la tecnología. El llamado subdesarrollo de determinadas áreas obedecía
a los lazos de dependencia y subordinación al desarrollo capitalista de otras”37.

Immanuel Wallerstein continuó esta situación, y propuso un marco analítico de escala


temporal y espacial para la comprensión del poder y cómo este afecta los cambios
sociales. Bajo esta mirada, el molde del poder proviene desde la economía mundial
capitalista, la cual fue impulsada uncialmente por Inglaterra, con la ideología del
liberalismo y posteriormente EE.UU. con el neo –liberalismo. De estas lógicas, anuncia
Wallerstein, la creación y a producción de bienes y posterior venta, que generan
plusvalías a partir de la noción acumuladora del capital, forja una distribución desigual
entre la sociedad generando sectores más ricos en determinadas áreas geografías. Es así
como los países exportadores de manufacturas, hoy en día tecnologías, dominan la
economía mundial y son llamados como países céntricos, y los países que exportan
materias primas son llamados países periféricos. La relación desigual de esto se produce
en que los países centrales son dueños de la transformación de los recursos naturales,
impendiendo, a propósito, que los países periféricos puedan tener industrias para que los
recursos naturales sean transformados, un ejemplo claro de esta situación es el cobre
chileno que es llevado hacia afuera para que otros países vendan los alambrados
eléctricos hechos con el cobre chileno. Así la “Especialización internacional de la
producción y de las formas de control del trabajo; procesos de producción integrados
que aseguran la transferencia de recursos y plusvalías desde los productores directos
hasta los estratos altos de los propietarios del capital y de los medios de producción
concentrados mayoritariamente en determinadas regiones; la inserción de todos los
procesos productivos dentro de un único mercado mundial; y la construcción de un
modelo de organización política que asegure el mantenimiento del orden económico” 38.
37
Espiñeira G.. & Keina R. (escritos). (2009). El Centro y la Periferia. Una reconceptualización desde
el pensamiento Descolonial Panel V (p. 2). En Colonialidad del poder: Capitalismo, Democracia y
Sociedad. III Training Seminario de Jóvenes Investigadores en Dinámicas Interculturales. Fundación
CIDOB. Congreso llevado a cabo en Barcelona, España.
38
Espiñeira G.. & Keina R. (escritos). (2009). El Centro y la Periferia. Una reconceptualización desde
el pensamiento Descolonial Panel V (p. 2). En Colonialidad del poder: Capitalismo, Democracia y
Sociedad. III Training Seminario de Jóvenes Investigadores en Dinámicas Interculturales. Fundación

24
Esto último, dice Wallerstein, se ha instaurado en la superestructura, donde se encuentra
la cultura y es a partir del proceso de globalización, la cual debe entenderse “como un
sistema histórico, como una realidad que se apoya en un sistema jerárquico heredado y
que, con una mayor capacidad de expansión, puede determinar la evolución de
distintos territorios. Se trata de un sistema que jerarquiza las diferencias áreas con una
lógica propia, apoyándose en una realidad de desigualdades creadas” 39, la que ha
generado las embestidas contra culturales en los diferentes espacios sociales. Por
consecuencia, y siguiendo a Bauman40, la globalización ha transformado las
concepciones de espacio – tiempo lo que transformaría la cultura de la sociedad o
comunidad a la que se le presente. Según Bauman, el tiempo se ha convertido en
relativo dependiendo del lugar que provenga un sujeto en la estructura social. En el
capitulo “Turistas y Vagabundos”41, este autor muestra que todos los humanos hoy en
día están obligados a viajar, sea cual sea la razón. Llamó Turistas a los que provienen de
las clases altas y Vagabundos a los que vienen de las clases bajas, no obstante todo son
agentes dinámicos. Indica que para los globalmente móviles, el espacio ha perdido sus
cualidades restrictivas y se atraviesa fácilmente en sus dos versiones, la real y la virtual,
donde los que están sujetos a sus localidades tienen que soportar los cambios impuestos,
sin poder hacer nada, los de arriba, viven en el tiempo, el espacio no rige para ellos,
pues cualquier distancia se recorre instantáneamente, refiriéndose a las comunicaciones
y al saber que genera tener acceso a ella, además, de la movilidad que se tiene por tener
el acceso a viajar por el mundo, y los de abajo viven en el espacio, que mata al tiempo y
lo mantiene fuera de su control, ya que viven en función de la subsistencia. Esta
situación de la sociedad ya no están así, gracias a la necesidad del mercado financiero
de tener a todas las personas consumiendo, la accesibilidad de las comunicaciones ha
cambiado, además, de lo que transmiten las comunicaciones y que generaría la cultura
de masas, no obstante, este sector está alejado de los grandes viajes por lo que no
pueden elegir grandes cambios de vida, a propósito de lo difícil que es escalar en la
CIDOB. Congreso llevado a cabo en Barcelona, España.
39
Del Mármol Cartaña, C.. (2007). Pasados locales, Políticas Globales: Los Procesos de
Patrimonialización en un Valle del Pirneo Catalán (p. 45). (Tesis Doctoral). Programa de Doctorado en
Antropología Social y Cultural. Universidad de Barcelona. Barcelona, España.
40
Bauman, Z. (1999). La Globalización: Consecuencias Humanas. España. Fondo de Cultura
Económica.
41
Bauman, Z. (1999). La Globalización: Consecuencias Humanas (p. 156). España. Fondo de Cultura
Económica.

25
estructura de la sociedad. Bajo esta lógica, las sociedades del mundo se han
transformado, por lo que lo local de cada lugar también lo ha hecho entrando en una
especie de hibrides entre distintas tradiciones (como se verá más adelante con Canclini).
Sin embargo, y bajo este mismo efecto, se ha tendido a buscar, y aquí el Patrimonio
Cultural entra en el juego, el resguardo de lo local por el conflicto que genera entre los
grupos sociales el desarraigo de sus tradiciones. Se han resaltado caracteres culturales
locales en función de la organización social, lamentablemente, y por culpa de la
empresa del turismo, esas características culturales han sido transformadas en objetos
mercantiles lo que ha perturbado aun más las relaciones sociales de las localidades. Por
consiguiente, existen ciertos caracteres locales que deben ser suprimidos cuando son
insertos en el mundo globalizado, este ultimo siguiendo la noción de progreso
económico, porque así se le está dando continuidad al proceso de dominación
desarrollista impulsada por las clases dominantes, proceso proveniente desde la
ilustración.

Por último, sumamente importante también es la tradición y tiene que ver


directamente con la herencia colectiva que se transmite por distintos canales a las
nuevas generaciones dentro del grupo social, a pesar de que trascienda en otras, además,
una otra sociedad puede no aceptar esa herencia por lo que aquella tradición moriría,
por esta razón la tradición, que es el legado del pasado, se renueva en el presente por lo
que es desde el presente que se reconsidera su continuidad. De tal forma, “La tradición,
para mantenerse vigente, y no quedarse en un conjunto de anacrónicas antiguallas o
costumbres fósiles y obsoletas, se modifica al compás de la sociedad, pues representa la
continuidad cultural. De aquí, justamente, su versátil capacidad de cambio y de
adaptación cultural. La tradición, para ser funcional, está en constante renovación, y
se crea, recrea, inventa y destruye cada día”42.

Todos los grupos sociales tienen tradición, ya que en cada grupo social, dependiente de
modo de producción especifico, ya sea dependiendo los recursos naturales cercanos, o
inmersos en la ciudad, se generan prácticas culturales especificas por lo que se generan
un tipo de lenguaje, entre otras cosas.

42
Arévalo J. M.. (2004). La Tradición, el Patrimonio y la Identidad. Estudios Extremeños, 60, 926.

26
Hoy en día, por razones obvias producto de la modernización Capitalista Neoliberal
que impulsa la globalización, las tradiciones más antiguas se han perdido o han entrado
en un proceso de hibrides. Este último término fue acuño por Canclini 43, el cual da
cuenta la versatilidad que se encuentran entre las mezclas clásicas provenientes de los
choques de dos tradiciones distintas, y que van coaptando cada vez más a los distintos
sectores de la estructura social. A partir de esto, establece que la hibrides de lo
tradicional se produce en nuestros días a partir de la emancipación, la expansión, la
renovación y la democratización. Este autor manifiesta que existen cuatro momentos
con que el proceso de hibridez se complementa. En el primer término dispone que la
cultura ha sido disparada a la sociedad por la emancipación moderna, las cuales están
reguladas por el individualismo, las políticas del Estado, las expresiones artísticas
autorreguladas y la racionalización de la vida social. En segundo término, ha dicho que
la renovación de la hibridación de la tradición proviene del impulso del desarrollo
industrial y de la educación media y superior (que está dirigida en función del desarrollo
industrial), que generaron los términos con que la cultura misma es dirigida por los
distintas organizaciones, de aquí el tercer término, proviene la innovación tecnológica y
la social que chocan con las tradiciones locales estableciendo su acoplamiento o un
rechazo por lo que se generan conflictos. El último término emana de la heterogeneidad
multitemporal que se ha producido en las metrópolis de América Latina, ya que se ha
establecido que la industria no elimina las técnicas locales de las distintas tradiciones si
no que las integra y se apodera de la dirección de aquella tradición44.

De este modo estos primeros conceptos nos acercan a una primera discusión de lo que
se ha generado históricamente para la comprensión del Patrimonio Cultural.

43
Canclini García N.. (1989). Culturas híbridas. Estrategias para entrar y salir de la Modernidad.
Grijalbo, México: ed. Paidos.
44
Canclini García, N.. (1997). Culturas Hibridas y Estrategias Comunicacionales. En Estudios sobre las
Culturas Contemporáneas. Época II. III. P. 111.

27
1.2. Conceptos que se han ligado al resultado del proceso de Patrimonialización.

1.2.1. La Construcción de la Identidad. Individual y Colectiva.

Si bien los conceptos de identidad y memoria están en estrecha relación con el


Patrimonio Cultural, se quiere dedicarles un poco más de tiempo, porque se considera
que para efectos de esta tesis, es necesario comprender detalladamente cómo se
instauran y se desarrollan estos conceptos dentro de las distintas organizaciones de
sociabilización.

Comenzaremos con el de identidad. Se ha establecido, primeramente, que la identidad


ha sido uno de los conceptos mas trabajados dentro de las ciencias sociales y que tiene
estrecha relación entre un individuo subjetivo, tiene o tendrá, con otro individuo
subjetivo generando una construcción a partir de la diferencia que se tenga con este otro
individuo, lo que generaría una acción social, lo que terminaría por influir en la
construcción personal. Según Nobert Bilbeny, “descubrimos nuestra identidad tan
pronto como tenemos verdadera experiencia de la alteridad” 45. Es decir, la existencia
de otros en el mundo y de diferente clase social. De esta manera podemos decir, que
esta condición en nuestros días, se ha dado desde que la ilustración comenzó a dar
forma a la Razón como producto de la modernidad, afirmada y producida desde la
relación civilización – barbarie creada por griegos y romanos, y que fue heredada a
Latino América desde los pensamientos e imaginarios renacentistas a propósito del
descubrimiento de América en este periodo y el encuentro entre los dos mundos, en
donde los americanos pasaron hacer los barbaros y los europeos los civilizados,
conflicto que se extendió posteriormente en la conformación de los Estados Nacionales
Latinoamericanos.

Por otro lado, se ha dicho también que la identidad se manifiesta cuando se entra en un
estado de compromiso con otros estableciendo similitudes, posicionándose un colectivo
a lo individual pero que se manifiesta con otros colectivos como un ente individual y
cerrado. Según esta lógica, Iñiguez señala “entre la singularidad de uno/a mismo/a y la
similitud con nuestros congéneres, entre la especificidad de la propia persona y la
45
Bilberty, N.. (1999). Democracia para la Diversidad (p. 119). Barcelona, España: ed. Ariel S.A.

28
semejanza con los/as otros, entre las particularidades de nuestra forma de ser o sentir y
la homogeneidad del comportamiento, entre lo uno y lo múltiple nosotros mismos nos
configuramos y nos vamos adecuando al comportamiento colectivo”46.

Bajo lo anteriormente dicho, la identidad juega una relación dialéctica y movible en su


propia conformación, por lo que la identidad es transformable y cambiante dependiendo
del espacio - tiempo que se ocupe entendiendo los distintos arraigos que producen las
personas y que van haciendo que su memoria entienda y acepte cosas distintas a las
otras personas. No obstante, necesita de reelaborar constantemente la subjetividad de los
distintos elementos culturales de cada persona para poder ser aceptado dentro de un
espacio social van predominando. Según Villoro, “… se enfrenta a una disgregación de
las imágenes sobre sí mismo. Un factor importante de esta desegregación es la
diversidad de sus relaciones con los otros. En la comunicación con lo demás, eso le
atribuye ciertos papeles sociales y lo revisten de cualidades y defecto” 47. Es decir, el
espacio social y las subjetividades que se encuentran en aquel espacio social van
confabulando el actuar de otras subjetividades por lo que la identidad depende mucho
de cómo se haya instaurado su función dentro del espacio social frente a la vida.

Como establece Miguel Bartolomé la identidad también se hace visible en lo


cotidiano, como un “espacio fundamental para la concreción de la conciencia social de
un grupo humano; espacio en el cual la cultura se despoja de su papel de norma ideal,
para pasar a asumirse como desempeño real; como organizadora y reproductora de la
matriz de conductas propias de una colectividad dada”48. A raíz de esto, la identidad
opera en distintas esferas, como en el idioma, el cual permite la identificación con un
grupo particular; pero también la historia del grupo es un elemento importante para
afirmar la identidad compartida de los sujetos. Como el mismo autor señala la memoria
colectiva sufre continuas transformaciones, las que operan como factores relevantes en
los cambios de la autoconciencia de un grupo que esta sociabilizando.

46
I ñ i g u e z , L . . ( 2 0 0 1 ) . I d e n t i d a d : D e l o P e r s o n a l a l o S o c i a l , u n Recorrido Conceptual.
En La Constitución Social de la Subjetividad (p. 209). Madrid. España: ed. Catarata.
47
Villoro, Luis. (2002). Estado Plural, Pluralidad de Culturas (p. 18). México D.F.: ed. Paidós.
48
Bartolomé, M. (1997). Gente de Costumbre y Gente de Razón: las Identidades Étnicas en México (p.
84). México D.F.: ed. Siglo XXI.

29
De forma tal, “…un sujeto nunca tiene una imagen de sí mismo si no es por la
mediación de otros sujetos… La identidad supone un sentimiento de pertenencia que
subyace al auto reconocimiento del grupo y expresa la valorización de los elementos
que conforman la propia cultura… por otra parte, la identidad implica la
concentración de lo ajeno, con lo foráneo, con lo extraño, con lo diferente, y desde ese
punto de vista es un entendimiento y una percepción de auto reconocimiento frente a
otro49. Es decir, un sujeto nunca sabrá lo que es realmente si no tiene primero la
información de otro que ha establecido como realmente es ese sujeto, sumado a que la
presentación de uno mismo necesita congeniar con lo que el otro no es, y así configurar
la identidad individual que finalmente terminaría siendo también colectiva, por lo que es
de suma importancia, establecer los parámetros de la construcción de la identidad y para
que establecer la construcción de una identidad, si es en función económica o en
función social, conflicto que se presentó en la configuración cultural de la Región de los
Ríos.

1.2.2. Las memorias individuales, colectivas y las memorias débiles y fuertes. La


historia oficial.

Se ha destacado que la memoria no es posible separarla de la identidad, porque sin


memoria no hay identidad y a la inversa. Ahora bien, y siguiendo a Halbwachs, este
autor establece la existencia de dos tipos de memoria, una Colectiva y una Individual50.
Básicamente, dice éste autor, que cada tipo de memoria están separadas, no obstante, se
necesitan una a la otra para poder funcionar como tal. Mientras existe una memoria
individual, existirá una memoria colectiva, la que está dando forma a esta memoria
individual, sin embargo, es a partir de la interpretación y aceptación de la memoria
colectiva, que la memoria individual se hace parte de ella, ya que la memoria individual
es sometida, bajo su propia lógica, a un proceso de aceptación de dicha memoria
colectiva. En otras palabras, aunque se puede decir que la memoria individual es
netamente producción de lo que una comunidad o sociedad dentro de su memoria
establece, es también la aceptación de esa memoria que logra generar una memoria
colectiva, porque incluso quienes no han vivido nunca en un lugar en especifico, pero
49
Gissi, J, Larraín J. & Sepúlveda F. (1995). Cultura e Identidad en América Latina (p. 13). Santiago de
Chile. Institución Chileno de Estudios Humanísticos, ICHEH.
50
Halbwachs, M.. (2004). Memoria Colectiva. España: Prensas Universitarias de Zaragoza, Nueva
Edición.

30
sus familiares si lo hicieron, por ejemplo, se han sentido con el derecho (aunque
también la pueden rechazar) de hacerse parte de esa memoria, por lo tanto la memoria
individual también está sometida a sus propios términos y desarrollos porque es el
sujeto mismo quien termina por hacerse parte o no de la memoria colectiva.

Es así como, la memoria, o el manejo de este concepto, dependen de diferentes


enfoques que uno lo pueda dar. Existen quienes la miran bajo el concepto de nostalgia,
proponiendo siempre que el pasado fue mejor, y que el cambio es algo malo.
Generalmente son los románticos (Romanticismo) quienes miran de modo tal la
memoria, y se oponen a la modernización. Habitualmente son quienes miran con mayor
amor el folclore y lo rural, no obstante, su error es cerrarse al entendimiento de la
complejidad con qué mundo globalizado se ha introducido y ha hecho sucumbir lo que
se expresa en lo local (como vimos anteriormente), por lo que ésta mirada termina por
ser mas utópica que real. A su vez, están los que miran a la memoria como un producto
modernizante, diciendo que el pasado ya está muerto al tener una noción de progreso
fundada en lo económico, es decir, miran la memoria y la identidad bajo la lupa de la
industria turística, vendidas como información a un público que existe para buscar dicha
información. Y por último, se encuentra la memoria historicista (de la cual yo me
considero parte al momento de generar este trabajo), la cual establece una visión crítica
y reflexiva sobre el pasado, entendiendo que estamos constituidos de pasado,
considerando que la reflexión del sujeto histórico y el entendimiento de que somos
producción cultural y social frente al presente y al pasado.

De este modo, y posteriormente al análisis que se produjo de la construcción de los


distintos tipos de memoria, importante también es decir que existen memorias que se
sobreponen a otras. Para entender mejor esta situación se evocará en lo que Enzo
Traverso acuña, comenzando con que la “Historia y la memoria son dos esferas
distintas que se entrelazan constantemente… esta distinción no debe ser interpretada en
un sentido radical, ontológico, pues ellas nacen de una misma preocupación y
comparten el mismo objeto: la elaboración del pasado” 51. Importante es esta definición
por que como se está interpretando el pasado originando el presente, tanto desde la
historia, como de la memoria, también lo hace el Patrimonio Cultural, por lo que la
51
Traversso, E. (2007). Historia y Memoria. Notas sobre un debate. En Historia Reciente. Perspectivas
y desafíos para un campo en construcción (p. 72). Buenos Aires, Argentina: ed. Paidos.

31
jerarquización de lo que puede ser patrimonializado, proviene de esta situación.
Continuando entonces y siguiendo con el mismo autor, es que “la memoria, entendida
como las representaciones colectivas del pasado tal como se forjan en el presente,
estructura las identidades sociales, inscribiéndolas en una continuidad histórica y
otorgándoles un sentimiento, es decir, una significación y una dirección. En todas
partes y siempre, las sociedad humanas han poseído una memoria colectiva y la han
mantenido a través de ritos, ceremonias, e incluso con políticas” 52. Sumamente
importante es esto, ya que como vimos anteriormente, las memorias, y específicamente
las memorias colectivas, se ven sumamente necesarias para poder generar los procesos
generacionales de lo que se ha considerado importante en cada época histórica o
sociedad. De esto se desprende entonces, que lo que se quiere recordar será lo que se
considere Patrimonio Cultural, por ende, sumamente trascendente es asumir que existen
memorias fuertes y memorias débiles, entendiendo a su vez que “la memoria se torna
una cuestión política y toma la forma de mandato ético – el deber de la memoria-, que
como lo ha remarcado justamente Tzvetan Todorov (1995), se transforma
frecuentemente en abuso”.

De tal modo, el autor comienza explicando, que existen memorias que se sobreponen a
otras. Dentro de las que se consideran débiles, Enzo Traversso hace la comparacion con
lo que dice Hobsbawm quien señala que “la unica diferencia entre una lengua y un
dialecto … reside en que la lengua esta protegida por la policia mientras que el
dialecto no, de manera que existen memorias que se oficializan por institcuiones,
mientras existen otras que son subterraneas, ocultas o prohibidas 53. Las memorias
fuertes seran las que darán origen a la historia oficial (son las que se institucionalizan)
por que inevtablemente tienen la situacion privilegiada de hacerlo. Mientas mas
institucionalizada este la memoria (fuerte) mas se hará publica su expresion,
disponiendo y moldenado la configuracion de la sociedad. Ejemplos de esto último hay
muchos, uno de ellos se da en los países que sufrieron atrocidades de DD.HH.
provenientes casi siempre de dictaduras militares. Así se han creado múltiples museos
de memoria, con distintos formatos y líneas museográficas, generando propuestas para

52
Traversso, E. (2007). Historia y Memoria. Notas sobre un debate. En Historia Reciente. Perspectivas
y desafíos para un campo en construcción (p. 70). Buenos Aires, Argentina: ed. Paidos.
53
Traversso, E. (2007). Historia y Memoria. Notas sobre un debate. En Historia Reciente. Perspectivas
y desafíos para un campo en construcción (p. 86). Buenos Aires, Argentina: ed. Paidos.

32
poder instaurar que nunca más se vuelva a repetir estos sucesos. Y viceversa, cuando se
encontraban las dictaduras militares en estos países intentaron socavar las memorias de
los movimientos de izquierda quemando libros proveniente de escritos marxistas,
matando a líderes sindicales, destruyendo cordones de trabajadores y exiliando a
muchas personas de sus espacios vitales.

Por otro lado, Jelin plantea la Memoria Oficial, proveniente, como vimos de la lucha
que disputan las memorias débiles y las memorias fuertes, a partir de la pregunta ¿Por
qué nacen diferentes historias para un mismo hecho histórico? 54. Comienza a decir ella
que todo parte por el relato que se instaura a partir de la construcción del estado/nación
proveniente luego de que los países americanos salen de la Monarquía de Fernando VII
de España y deben comenzar a organizar sus territorios. Las elites, quienes se sienten
herederos del poder y que conformarán mas tarde a los liberales y conservadores, luchan
por el orden de los países y para lograrlo crean un discurso hegemonizador y
homogeneizador para su fin. Por lo tanto, nacen los héroes de la nación quienes a partir
de sus actos heroicos aglutinan a las personas que viven dentro del territorio. En todas
las plazas principales de Chile encontramos las imágenes de Arturo Pratt y Bernardo O´
higgins instaurando la unidad necesaria para que una persona que viva en el Arica, por
ejemplo, se sienta tan chileno como una persona que vive en Punta Arenas. De tal
forma y según Jelin, nacen los discursos oficiales, pero mientras hay historias oficiales a
su vez nacen también las historias no oficiales. Existen historias que se resisten ser
olvidadas por la historia oficial, pero esas personas, que contienen las memorias no
oficiales, generalmente viven en la clandestinidad por que han sufrido momentos
traumáticos y represivos que logran que sus memorias sean ocultadas 55. La censura de
que quienes sufrieron es explicita, sus memorias son clandestinas y subalternas, están
silenciadas y calladas, y esto genera, a su vez, huecos traumáticos que forman parálisis
colectivo y silencio. Por consiguiente, luego del fin de la dictadura las aperturas
políticas de la esfera pública empezaron a incluir las memorias silenciadas para poder
reconocer sus traumas y poder volver a establecer parámetros sanos dentro de una
sociedad tan dañada como lo son las sociedades luego de sufrir dictaduras. Bajo esto,
Jelin postula “La lucha se da frente a distintos actores que reclaman el reconocimiento
y legitimidad de sus palabras y demandas… Quienes quieren hablar lo hacen por dos
54
Jelin, E.. (2002). Los Trabajos por la Memoria (p. 39). Madrid, España: ed. Siglo XXI.
55
Jelin, E.. (2002). Los Trabajos por la Memoria (p. 39). Madrid, España: ed. Siglo XXI.

33
razones, una para dar una versión verdadera y otra por reclamar justicia…”. Es así
como el pasado es parte de la demanda del presente. Según Jelin y a partir de lo anterior,
las aperturas políticas no implican necesariamente que la historias oficiales y la
sociedad se hagan parte de un espacio contrapuesto, si no que más bien, el Estado
(quien dirige la historia oficial) construye una estructura donde el relato del pasado se
legitime según la mayoría de los ciudadanos de la nación y sobre todo, si es que el
Estado, bajo su epistemología política, debe obedecer ese sentido, ya que dentro del
mismo Estado hay disputas internas en busca de qué memoria se legitima para poder
seguir en el poder.

Dentro el campo del Patrimonio Cultural esto no se escapa, y de hecho, en el mismo


proceso de patrimonialización se ha instaurado, ya que se ha considerado ciertas
prácticas culturales, por ejemplo, más importantes que otras, provenientes desde la
historia oficial (que están ligadas al poder hegemónico de las clases de elite), así se ha
establecido que la historia de las elites (de quienes se han originado las memorias
fuertes) y todo pasado producido por este sector, será el pasado de excelencia al
momento de configurar propuestas de creación y conservación de distintas formas de
identidades, que terminan generando lo que será considerado como Patrimonio Cultural.

1.2.3. El Patrimonio Cultural y su Función Social.

“La identidad es tensión entre el yo y el otro, entre el sujeto y el objeto. Es la


respuesta a la inaplazable necesidad de adaptación al mundo objetivo, y por ello es una
perpetum, es decir, es cualitativamente incompleta: de ahí su plasticidad, su
dinamismo, su contingencia, su impureza”56.

Así como establece Javier de Lucas, la identidad es una presentación no solamente


entre el yo y su alteridad, como vimos anteriormente, también tiene estrecha relación
con el objeto. Este objeto, o mundo objetivo como le llama, es considerado frente a la
construcción social, es decir, lo que se ha establecido socialmente para ir construyendo
el mundo en conjunto de lo social. Pues bien, las identidades colectivas son
contingentemente vinculadas a situaciones específicas en un espacio y un tiempo
56
De Lucas, F. (2004). Globalización e Identidades. Claves Políticas y Jurídicas (p. 22). Barcelona,
España: ed. Icaria.

34
concreto que se va construyendo con aportes externo, a esto se le ha llamado
mecanismo de control cultural, y que se han fundado en la manipulación ideológica,
simbólica y de apropiación de ritos tradicionales57. Esta pertenencia está instaurada en la
experiencia que se va desarrollando cotidianamente, va generando arraigos que se
piensan que son netamente subjetivas pero que son realmente externas. Por otra parte,
siguiendo la noción de habitus de Bourdieu, la sociedad estaría moldeada por las
estructuras sociales, ya que el actuar social se aprende, por lo que la identidad no
escapa a esta concepción.

Por lo tanto, la idea del Patrimonio Cultural debe entenderse, no como un fenómeno
natural del proceso de sociabilización humana, así como lo sería la construcción de la
identidad, sino como, una construcción prácticamente intelectual que se acepta en las
relaciones sociales. Sin embargo, y como vimos, tiene la capacidad de resistir y
mantener una cultura que viene perdiendo su representación en el mundo. De manera
tal, como el Patrimonio Cultural responde a ese llamado colectivo de conservar lo que
les dará sentido en el mundo a una forma de sociabilización, es que debemos entender
que los procesos de poder serán impuestos desde los intereses de clase, dentro de la
Construcción del Patrimonio desde Arriba, Llorent Prats señala, “el Patrimonio
Cultural, no se produce en todas las sociedades humanas, ni en todos los periodos de la
humanidad”58, de manera que el Patrimonio Cultural se ha presentado en la historia y en
un contexto histórico puntual de algunas sociedades según la necesidad que las clases
dominantes presenten. Por consecuencia, la misma autora establece que el Patrimonio
Cultural es una “representación simbólica de la identidad, un factor de cohesión,
espacio referencial, la identidad ofrece a un grupo –tanto a los individuos que lo
forman como a su descendencia-, los medios para el propio reconocimiento, para
perpetuarse, para proyectarse en el futuro59”, de manera que esta proyección no está
alejada de lo que sea ha instaurado como proyecto histórico de quien domina la
estructura social. Según Clanclini, “Los sectores dominantes no solo definen cuales
bienes son superiores y merecen ser conservados, también disponen de los medios
económicos e intelectuales, tiempo de trabajo y de ocio, para imprimir a esos bienes

57
Bartolomé, M. (1997). Gente de Costumbre y Gente de Razón: las Identidades Étnicas en México (p.
79). México D.F.: ed. Siglo XXI.
58
Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio (p. 20). Barcelona, España: ed. Ariel S.A..
59
Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio (p. 8). Barcelona, España: ed. Ariel S.A..

35
mayor calidad y refinamiento”60. De manera que las clases dominantes tienen los
medios para generar la articulación necesaria para que la sociedad considere lo que es
Patrimonio Cultural, incluyendo a ciertos sectores y otros no a lo que es considerado
como patrimonio nacional., que como se verá más adelante, es la finalidad suprema que
desde su construcción desde arriba se ha generado.

Continuando con Canclini y bajo lo anterior, “en las clases populares encontramos a
veces una extraordinaria imaginación para construir casas con desechos en una
colonia marginada… pero difícilmente ese resultado puede competir con el de quien
disponen de un saber acumulado históricamente 61. Es imposible competir con los que
concentran los vínculos de lo que es o no es Patrimonio Cultural, sobre todo si esos
vínculos están dominados por las políticas de Estado, que avalan esta situación. La
función del Estado en la conducción del uso social del Patrimonio proviene, por un
lado, por la valoración y promulgación al nacionalismo, se interesa por el “patrimonio
para frenar el saqueo especulativo … porque es alto el prestigio de los monumentos, es
un recurso para legitimarse y obtener consenso” 62, y por el otro, en función de la
necesidad económica que tienen algunos sectores empobrecidos producto de su lejanía
con los grandes centros económicos, ya que, “es innegable que en ciertos pueblos
pobres, para cuyos habitantes la única opción es emigrar, la incorporación de las
artesanías al mercado urbano y turístico posibilita que muchos indígenas y campesinos
permanezcan en sus comunidades y reactiven sus tradiciones productivas y
culturales63”. Lamentablemente, es que, y como este mismo autor dice, la hibrides que
genera esta situación va generando la mutación constante de ciertos rasgos que deberían
ser considerados realmente como Patrimonio, sin embargo, se van debilitando y a larga
perderá lo que algún dia le dio la posibilidad económica, es decir, serán sacados a bailar
y luego los dejarán sentados.

60
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 18). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
61
Canclini García, Néstor. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 19). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
62
Canclini García, Néstor. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 20). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
63
Canclini García, Néstor. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 21). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.

36
Según Canclini, existen 4 paradigmas políticos - culturales que responden a los usos
sociales del Patrimonio Cultural a partir de lo que hemos expuesto anteriormente. El
primero lo llama tradicionalismo sustancialita, y deriva de “quienes son los que juzgan
los bienes históricos únicamente por el alto valor que tienen en sí mismo, y por eso
conciben con su conservación independiente del uso actual 64”, es decir, por valores
como el tiempo desde que es creado, quien lo creo, etc. El segundo paradigma se da por
el mercantilismo que se suministra por parte de la industria inmobiliaria y turística del
Patrimonio Cultural, la que genera en su condición, al patrimonio como un objeto
transferible por dinero, o de otro modo, su activación como patrimonio en función del
Capitalismo. El tercer paradigma tiene que ver con la difusión y promoción del
patrimonio en las concepciones conservacionistas y monumentalitas “en general las
tareas del poder público consiste en rescatar, preservar y custodiar especialmente, los
bienes históricos capaces de exaltar la nacionalidad 65”, además se utiliza esta
concepción para legitimar el arraigo producido y que se quiere seguir reproduciendo en
la sociedad, a partir de quienes conservan y resguardan lo que se ha considerado
Patrimonio Cultural. Y el último paradigma, es el participacioncita, y “concibe al
patrimonio y su preservación en relación con las necesidades globales de la
sociedad”66, es decir, revalidando lo que se ha construido en las mentalidades de la
sociedad, como por ejemplo, el día del Patrimonio Cultural en Chile el que se realizada
el último domingo de Mayo de todos los años, y como motivo especial del bicentenario
de Chile el año 2010, se realizó por lo menos una docena de veces.

De esta forma, el Patrimonio Cultural en su función social, a propósito de la necesidad


de activación, para que sea considerado como patrimonio responde, “Evidentemente…
a articular un discurso que quedará avalado por la sacralidad de los referentes. Este
discurso dependerá de los referentes escogidos, de los significados de estos referentes
que se destaquen, de la importancia relativa que se les otorgue, de su interrelación y
del contexto. De todo ello se deduce que ninguna activación patrimonial, de ningún

64
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 22). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
65
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 23). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
66
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 24). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.

37
tipo, es neutral o inocente, sean conscientes o no de esto los correspondientes gestores
del patrimonio”67

67
Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio (pp. 32 - 33). Barcelona, España: ed. Ariel S.A..

38
Capitulo III - EL Patrimonio Cultural en relación con los procesos históricos de
Chile.

3.1. El nacimiento del concepto de Patrimonio Cultural.

Para comenzar, y comprender como el poder es quien guía la construcción del


Patrimonio Cultural hasta nuestros días, a propósito del estudio cultural y político del
territorio de la Región de Los Ríos, se generará como se ha producido y desarrollado
históricamente el concepto mismo de Patrimonio Cultural.

De esta manera, y siguiendo a Mariano Andrade Butzonitch, se establece que el


concepto de patrimonio ha conservado la idea de la herencia del padre. Culturalmente,
esta herencia se ha presentado delante del patrimonio como aquel quien transporta un
símbolo, y no cualquier símbolo, sino los símbolos de poder, por que como vimos, el
patrimonio cultural no es inherente a la construcción de la realidad. De tal forma, esta
noción proviene de la herencia y se ha trasladado a la ley, como modelo y prototipo de
la nación. En otros términos “el concepto de patrimonio hace referencia o crea la
imagen de herencia, un legado que se recibe y que contribuye a la continuidad
identitaria de una familia, una sociedad, de una nación. Así también, el patrimonio
cultural ha sido concebido como aquellos elemento materiales e inmateriales que
socialmente se definen como imperativos de preservación y altamente valorado para la
transmisión de la cultura e identidad de una comunidad, región o país”68.

El Patrimonio Cultural, por lo tanto, se instaura como un mecanismo de control


cultural que el poder utiliza para guiar culturalmente a la sociedad, buscando como
finalidad la creación de una comunidad imaginada (tema tratado más adelante), que
mantenga, primero, la conexión simbólica (expresada en el Nacionalismo) entre los
habitantes dispuestos en un territorio especifico, y segundo, para mantener la estructura
social intacta, es decir, mantener el proyecto histórico de las clases oligárquicas sin
ningún cambio, mediante la imposición cultural hegemónicamente hablando. En este

68
Maillard, C. (2012). Construcción Social del Patrimonio. En Hecho en Chile (p. 19). Reflexiones en
torno al Patrimonio Cultural. Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
Andros Impresores.

39
sentido, muy importante son los conceptos de Bourdieu, llamados por él, habitus y
capital simbólico, que da la facilidad de entender de mejor manera esta conexión entre
poder (Estado y Capitalismo) y la cultura propiamente tal (tema abordado más
adelante). Ahora, la conexión que existe entre poder, economía y cultura no es un tema
nuevo, y proviene desde el Renacimiento, época histórica donde se articulan
interpretaciones del pasado Greco – Romano y que los europeos avalan para el intento
de salirse del la escura edad media (como ellos veían a este periodo donde los germanos
dominaron Europa). Es también, que bajo la lógica anterior, se comienza a formar
colecciones privadas de obras de artes, tanto antiguas, como nuevas, provenientes del
pago a artistas considerados de alta categoría, por mecenas. Se ha estimado que uno de
los principales mecenas de esta época fue Lorenzo de Medici (1449–1492) quien ha
sido nombrado y reconocido como el Patrono de las Artes. Por otra parte, el
Renacimiento como expresión cultural, se fundaba ideológicamente como discurso con
el Humanismo, que era un movimiento literario de las clases dominantes que luego
dieron origen a la Ilustración. Quienes dieron origen a este movimiento fue el Poeta
Petrarca quien impulsaba el Renacimiento en conjunto con el Cristianismo a toda costa.
Así fue avanzando el tiempo, y la acumulación de arte, mirado como un producto y una
práctica de poder, se fue afianzando en entre los burgueses, nueva capa social del
antiguo régimen que provenían de la acumulación de riquezas mediante la venta y
compra de mercancías. De tal manera, para los artistas, como pintores y escultores (que
por cierto tuvieron un alza en la escala social de la época superior a los artesanos), para
los humanistas burgueses fueron muy importantes porque ellos afianzaban su valor
intelectual, y mucho más importante, se traslado a un culto a la personalidad del artista,
que se convirtieron en valores básicos de la filosofía burguesa, “el individualismo y el
predominio del mercado como forma de atribuir valor a los objetos” 69. Por otra parte, y
siguiendo nuevamente a Mariano Andrade Butzonitch, ha establecido que esta ideología
del Humanismo es “la misma que va a organizar la pedagogía en la era capitalista, el
arte abandona tempranamente las funciones políticas, para dedicarse a la práctica de
la formación moral y pedagógica, todo un servicio a la hegemonía que consiste en
preservar a la vez, un modelo de virtud cívica acorde con los cánones clásicos, e
ignorar lo social, como cotidiana construcción de significado”70, de tal manera, la

69
Amín, S. (2001). Imperialismo y Globalización (p. 63). http://www.rcci.net/globalización/
2001/fg175.htm.

40
función hoy en día del Patrimonio Cultural es enseñarle (conducir) a las personas de la
sociedad a mantener la visión de mundo creado desde lo político y el poder.

3.2. EL Patrimonio Cultural y la construcción del Estado Nación. El


Nacionalismo y el siglo XIX.

Es sabido que Chile se emancipa de la Corona Española a comienzo del siglo XIX y
comienza con el proceso de construcción de su Estado – Nación, la cual, impulsada por
la clase dueña de la tierra, es decir, los terratenientes, ya que vieron con horror sus
intereses al ser afectados por las reformas borbónicas las cuales cumplieron con dar
impulso a la economía americana para incrementar el aporte que llegaba de esta región
a España la que fue acompañada con una gran reforma burocrática, les quito poder
políticos, generando disgusto de este sector. Esto último, impulsó a declarar
sentimientos de patria y nación, la que para lograr la independencia integraría a las
capas sociales más bajas ya que generarían las grandes masas milicianas para lograr la
emancipación. Posterior a la obtención de soberanía, específicamente Chile, comenzó
de inmediato a construir la forma de entablar los diferentes mecanismo que serian
utilizados para generar el arraigo necesario de los habitantes que pertenecían en el
interior del territorio suscitado por el principio de derecho utis prossidetis jure (el cual
establecía la mantención de los limites de los países cuando se encontraban en la
Colonia). Sergio Grez señala, “el estado republicano chileno que se empezó a construir
en el primer cuarto del siglo XIX fue resultado de la voluntad política de la aristocracia
criolla para construirse en clase dominante autónoma independiente del impero
español capaz de negociar con las grandes potencias de la época (principalmente
Inglaterra) un nuevo pacto colonial”71. Por consiguiente, ¿Por qué nace la necesidad de
crear una identidad cultural (o en su defecto, un Patrimonio Cultural) arraigando a las
personas a la nación, y de qué forma se conforma este proceso histórico?, el mismo
autor nos responde “fue necesario dotar de una identidad cultural propia para

70
Andrade B.. & Mariano M.. (2009). Poder, Patrimonio y Democracia (p. 13).
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=62815957002> ISSN 1870-0063.
71
Grez, Sergio. (2012). Breves reflexiones sobre Patrimonio Histórico: a propósito de Chile, el Estado
Nación y el Pueblo Mapuche. En Hecho en Chile. Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (p. 78).
Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.

41
diferenciarse de la antigua metrópoli colonial y de sus homólogos iberoamericanos” 72.
Para continuar, Sergio Grez determina, que por paradójico que sea, los primeros intentos
de arraigo a la naciente nación necesitó romper con el pasado español y para lograrlo se
evoco en un mito alternativo, el cual se origino en la cultura indígena y como referente
al araucano, pero solamente fue para poder hacerse parte de esos territorios que los
españoles no habían podido conquistar encontrados posteriormente a la frontera natural
del rio Bio - Bio73. Por otra parte, un segundo mecanismo de arraigo se generó a partir
del apoderamiento de festividades que provenían desde la colonia. Milton Godoy
advierte que bajo esta lógica que “tal como había sucedido en América durante la
dominación hispana, se construyo una arquitectura festiva efímera, que junto a las
expresiones artísticas en términos amplios… se convirtieron después de la
independencia en instrumentos de propaganda y difusión de la ideología y valores de la
naciente republica libre”74. Es decir, las clases dominantes utilizaron las festividades
populares como expresiones de lo nacional de manera que no se hiciera efímero esto
que se estaba presentando.

Si bien esto último no explica como Chile en su construcción del Estado – Nación
utilizó el Patrimonio Cultural como agente integrador, si se entiende como se produce la
apoderación de la cultura por parte de las clases dominantes y como necesitó la
construcción de una identidad, que fuera capaz de generar arraigo al territorio dominado
por las clases hegemónicas.

Para continuar y siguiendo a De Varine, el modelo que se optó para la construcción del
Estado - Nación en América fue a partir de un proceso llamado codificación, significó
el ordenamiento de la cultura cuando, como vimos, se intentaba articular bajo la noción
particularizante, este autor dice:
72
Grez, S.. (2012). Breves reflexiones sobre Patrimonio Histórico: a propósito de Chile, el Estado
Nación y el Pueblo Mapuche. En Hecho en Chile. Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (p. 78).
Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
73
Grez, S.. (2012). Breves reflexiones sobre Patrimonio Histórico: a propósito de Chile, el Estado
Nación y el Pueblo Mapuche. En Hecho en Chile. Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (pp. 78 -
79). Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
74
Godoy Orellana M.. (2007). ¡Cuándo el siglo se sacará la máscara!. Fiesta, carnaval y
disciplinamiento cultural en el Norte Chico. Copiapó, 1840-1900. Santiago de Chile: HISTORIA núm.
40, I. 8.

42
“El modelo de la "herencia europea" que distingue lo distinguido y lo bajo, lo
legítimo y lo espurio, lo bello y lo feo, lo civilizado y lo bárbaro, lo artístico y lo
ordinario, lo valioso y lo trivial, lo nuevo y lo antiguo. Su resultado es un diseño de
círculos concéntricos rígidamente jerarquizados; la alta cultura legítima en su interior,
con las "bellas artes" como modelo; la cultura tolerada que abarca del jazz al rock, del
arte prehispánico a las religiones orientales, y el círculo exterior de la intolerancia y la
exclusión, donde son relegados, por ejemplo, los productos expresivos de las clases
marginadas o subalternas (artesanía popular, "arte de aeropuerto", "arte porno")75.

Ahora bien y considerando lo anterior, ¿bajo qué estructura la cultura se manifestó en


torno a la construcción de la sociedad a partir de la jerarquización de las expresiones
culturales que fueron generando sentimientos de arraigos masivos?

Para responder esta pregunta debemos repasar como se construye el sentimiento de


nación, ya que se ha establecido que es efectivamente la nación y el Nacionalismo
propiamente tal, a quienes se les encargó la misión de articular socialmente a una
sociedad dentro de un territorio, de forma que y según Renán “una nación es ante todo
una dinastía, que representa una antigua conquista, aceptada primeramente y después
olvidada por la masa del pueblo”76. Preciso es decir que para nada el Nacionalismo es
un ethos, como lo consideraba Renán, ya que el Nacionalismo es una construcción
necesaria que arraiga a las personas a un país – estado. Bajo el proceso de su
construcción, y según Ernest Gellner, la educación, las fiestas cívicas, la prensa, entre
otros factores va construyendo la nación y son quienes están en el poder, o en la
dirección del Estado quienes la configuran. Según esta lógica, la nación, y a medida que
este va adquiriendo soberanía sobre su territorio a partir del funcionamiento estatal,
tiene la capacidad de articular la integración social configurando las identidades
mediante emerge como director de los interés que se hacen creer, son naturales a la
sociedad77. Este acercamiento, de lo que es nacional, se manifiesta alrededor de un
centro único de poder simbólico, estableciéndose el Estado como conductor de aquel
75
De Varine, H. (1976). La Cultura de los Autores (p. 33). Paris, Francia: Editores du Seuil.
76
Renan, Ernest. (1882). ¿Qué es una Nación?.
http://enp4.unam.mx/amc/libro_munioz_cota/libro/cap4/lec01_renanqueesunanacion.pdf.
77
Gellner, E.. (1997). Naciones y Nacionalismo (p. 20). España: Alianza Editorial.

43
poder simbólico que se presenta como lo nacional. Por consiguiente, ¿Cómo se logra lo
nacional?, para responder esta pregunta es necesario evocarnos a lo que Benedic
establece en su libro “Comunidades Imaginadas (1993)”.

Según este autor, el Nacionalismo nació como una comunidad política imaginada,
limitada y soberana78. Imaginada porque todos los miembros de esta no se conocen y
probablemente nunca se conozcan entre sí, pero mentalmente viven comunitariamente.
Es limitada porque crea particularidades, emergiendo como algo distinto de otro país
(signos patrios, distintas prácticas culturales, comidas, etc.), por ultimo lo establece
como soberana, porque esta comunidad es imaginadamente libre, es decir, ni Perú ni
Argentina controlan lo que en Chile se produce política y económicamente por ejemplo.
Es así como este autor, y a pesar de que el análisis de este libro es para entender los
nacionalismos producidos en África, analiza la conformación de las comunidades
imaginadas en América preguntándose inicialmente ¿Por qué fueron las comunidades
criollas las que concibieron en época tan temprana la idea de su nacionalidad, antes,
incluso que en Europa? Las dos razones que nacen inmediatamente ante esta pregunta,
según el autor son: “el fortalecimiento de Madrid y la difusión de las ideas ilustradas.
Las políticas aplicadas por el déspota ilustrado Calos III, frustraron, irritaron y
alarmaron cada vez más a las clases altas criollas donde Madrid impuso nuevos
gravámenes, incremento la recaudación e hizo efectivo monopolios comerciales 79.
Según Anderson, uno de los factores que facilito la independencia americana fueron las
clases altas criollas, quienes se beneficiaron con esta situación, ante la arremetida
violenta de las leyes establecida por Madrid. Además, que las colonias liberadas
americanas hayan pertenecido a una unidad administrativa anteriormente, así como el
clima y la gran extensión del territorio, hizo que fuera difícil para los españoles generar
el sentimiento de simultaneidad, por lo que cada país de América creo entre sus clases
criollas ciertos sentimientos de autonomía. Por otro lado, para Anderson, los factores
económicos, liberalitas e ilustradas de los criollos podrían haber creado por si solos la
clase o la forma de comunidad imaginada que habrá de defenderse contra las
depredaciones de otros regímenes alejados a lo que ellos querían hacer al momento de

78
Benedict, A.. (2006). Comunidades Imaginada. Reflexión sobre el origen y difusión del
Nacionalismo. México D.F.: Fondo de Cultura Económica.
79
Benedict, A.. (2006). Comunidades Imaginada. Reflexión sobre el origen y difusión del Nacionalismo
(p. 81). México D.F.: Fondo de Cultura Económica.

44
crear el incipiente Estado – Nación, manifiesta que también, la oposición Centro -
Periferia, que se estaba gestando entre los criollos Americanos y la corona, lograron
acceder a sentimientos de unidad mediante la camarería nacida a la pregunta ¿Por qué
estamos aquí juntos?, realizando de tal manera un proceso intelectual que se fue
afianzando mediante avanzando el siglo XIX80.

Si bien Anderson nos establece la unidad entre los criollos que fueron despertando los
sentimientos de unidad necesarios para la creación de la nación, éste no responde como
se instaura los mecanismos de dominación. Bajo este entendimiento, el Patrimonio
Cultural juega un rol esencial, a media que se entiende la necesidad de articular la
Comunidad Imaginada de las personas que habitan el territorio perteneciente a Chile en
la construcción de la identidad durante las primeras décadas posterior a la
Emancipación. De este modo, la función social que experimentó el Patrimonio Cultural
en aquel entonces fue la de generar una particularidad unificadora de las distintas
realidades e identidades, haciendo que convergerán en una sola, una Identidad Nacional
capaz de articular todas las experiencias de los chileno frente a la construcción, siendo
evidente que hasta nuestros días esta función jamás se ha detenido.

3.3. El Patrimonio Cultural y su función acumuladora de Capital. El Patrimonio


Cultural como un objeto mercantil.

Dejando de lado la función integradora del Patrimonio Cultural, a partir de la


penetración del Capitalismo en Chile, que entre historiadores se ha establecido a partir
de la Guerra del Pacifico (o de la conquista del norte) en 1879 en donde los chilenos se
apoderan de territorios peruanos – bolivianos para conseguir las materias primas,
principalmente el salitre, el cual cambia su función y pasa a hacer un producto
económico programado para el consumo. Sergio Grez establece que en este nuevo
periodo, “al menos en apariencia, ya no se quiere unificar las singularidades – como se
hacía en el auge de la construcción del Estado - Nación –, sino sacan a relucir la
diversidad y diferencias… de esta manera, vivimos en a la fiesta de la diferencia,
anclada en el pasado, pero como una mera replica estética de culturas heredadas de
esa diversidad que en nuestros tiempos son víctimas de la dominación y de la
80
. Benedict, A.. (2006). Comunidades Imaginada. Reflexión sobre el origen y difusión del
Nacionalismo (p. 101). México D.F.: Fondo de Cultura Económica.

45
desigualdad81” De tal forma, en la medida que avanza el Capitalismo en Chile nace la
necesidad de establecer diferencias locales, que por cierto, terminan de igual manera
siendo particularidades, por ejemplo, hoy en día la industria del turismo se sabe esta
situación y busca generar este proceso para posicionarse económicamente frente a otro,
es decir, generar competencia a partir de diversificación de particularidades. No
obstante, fue casi inevitable complejizar esta forma de entender la identidad cultural por
parte del Estado. La heterogeneidad social que provoca el Capitalismo a medida que
abarca todas las esferas de la vida, ha provocado la generación de diversidades
heterogeneizadas y que se le han dado el nombre de sub - culturas, y por lo tanto, restar
lo que antes los unía, es decir, su lucha por mejorar la condición de sus vidas (acceso a
salud, educación, mejor vivienda y alimentación), consecuencia de la pérdida de su
conciencia de clase actual. Un ejemplo de esto último, es el paso de los obreros; en el
periodo de dictadura, a convertirse en empleados de servicios, es decir, trabajadores de
tiendas comerciales, y que al estar integrado al neoliberalismo de esa forma, ha recibido
sus concepciones básicas, entre ellas, el individualismo, proyectando su futuro bajo
núcleos pequeños, como son hoy en dia el núcleo familiar, y no tras una colectividad
mayor a eso, como seria vivir entre hermanos, tíos, abuelos todos juntos (como se hacía
anteriormente).

Después de este pequeño análisis la pregunta que nace es ¿Cómo el Patrimonio


Cultural se va familiarizando, teniendo como antecedente de poder, con el Capitalismo
desde el siglo XX hasta el siglo XXI?

Para Amin “El Capitalismo es la fuente del poder, cuando en los sistemas anteriores
es a la inversa, o también indicando que la ley del valor no sólo rige el ángulo
económico del Capitalismo, sino además todos los aspectos de la vida social" 82, ¿Qué
rige bajo la construcción Capitalista, la construcción de la sociedad?, claramente es la
acumulación del dinero y el futuro proyectado en los parámetros que se han creado para
su funcionamiento. Marx establecía, que dentro de la relación social que se proyecta

81
Grez, Sergio. (2012). Breves reflexiones sobre Patrimonio Histórico: a propósito de Chile, el Estado
Nación y el Pueblo Mapuche. En Hecho en Chile. Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural (p. 84).
Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
82
Amín, S. (2001). Imperialismo y Globalización (p. 15). http://www.rcci.net/globalización/
2001/fg175.htm.

46
posteriormente a la revolución industrial, se encuentran los que tienen las maquinarias y
los mecanismos de producción, y están quienes utilizan su fuerza de trabajo, utilizando
aquellos mecanismos de producción, que por lo demás genera un modo de producción
(tema que será abordado en profundidad o con más detalle). Para los que tienen las
maquinarias de producción, la acumulación de riquezas somete a los otros que no tienen
las riquezas, direccionando a estos últimos en un sueño eterno para poder alcanzar
aquellas riquezas, formando así una dependencia cultural por que los que querían llegar
a tener riquezas reproducirán los mecanismos creados para el alcance de esos capitales.

A partir de esta situación, la maquina capitalista comenzó a generar desfragmentación


de los grupos que se relacionaban colectivamente generando que los símbolos y
prácticas culturales que se habían generado se vallan olvidando dentro de las memorias
que pertenecen a la colectividad. EL geógrafo David Harvey, pronunciando a Marx, nos
habla un poco de cómo se genera esta dependencia cultural. “Marx sostenía que
cualquier tipo de producción requería el ejercicio previo de la imaginación humana; se
relaciona siempre con la movilización de los deseos, propósitos e intensiones humanas
con un fin determinado. El problema bajo el Capitalismo industrial es que se niega el
acceso a este proceso a la mayoría de la gente: unos cuantos elegidos imaginan y
diseñan, toman todas las decisiones y disponen las tecnologías que regulan la vida de
los obreros, por lo que se le niega a la mas de la población el despliegue de la
creatividad humana”83.

De esta manera, el Capitalismo va impulsando a las grandes masas a actuar bajo la


necesidad establecida tras dese de la clase dominante de mantener una estructura social
determinada para mantener su proyecto histórico y por eso la necesidad de estar siempre
en el poder.

Retomando a De Varine nuevamente, él identifica que la cultura entra en una fase de


institucionalidad, en el sentido que es el Estado burocrático (o el poder político
administrativo) el que va generando de apoco políticas culturales para mantener un
orden dentro de las distinta producciones simbólicas de la cultura. Si bien, para esta
altura y como se ha visto, la heterogeneidad de la sociedad ya se había expresado, tanto
83
Harvey, D. El Capitalismo: La Fábrica de la Fragmentación (p. 23). Revista Vuelva núm. 190.
http://www.letraslibres.com/sites/default/files/pdfs_articulos/Vuelta-Vol16_190_07CptFbFrgDHly.pdf

47
social, cultural, ideológica y políticamente, se comenzó con un gran esfuerzo por
establecer los parámetros con que los estados y las clases dominantes comenzaron a
formar y validar la forma de ver y hacer historia, creando instituciones que manifestarán
su pasado como forjador de la historia total de toda la sociedad. Así, museos y
exposiciones, fueron tomando la dirección de establecer que es cultura realmente, y que
no puede ser cultura, y como es el caso de la fundación del Museo Histórico Nacional
de Chile el 2 de mayo de 1911.

Sentado esto, en lo que respecta a como se expresa la cultura en la sociedad a


comienzos del siglo XX, se debe entender que la clase dominante de esta época tiene
seria tendencia al buen tono, la valoración al dinero y al ocio (valores europeos) y que
van provocando que “la clase alta, la que antes había sido austera y honorable, se
había vuelto codiciosa y ostentosa y hacía gala de su riqueza ante las masas
paupérrimas”84, de manera que el consumo del arte se generaba por mera moda y como
producto de poder y control. Vergara y Barros comenta de esto último, “El buen tono
apunta a una vasta gama de patrones de conducta cuyo denominador común es el de
estar regidos por la moda, vale decir, por esa convención que define todo aquello que
es tenido por elegante y refinado”85.

Para continuar, la tendencia de la Oligarquía, al Buen Tono se mantuvo hasta que en el


año 1929 cae la economía Capitalista Liberal (forma con que el Capitalismo funcionaba
hasta ese entonces y sustentaba la vida de la oligarquía ya que bajo la lógica mono –
exportadora, modelo económico mundial de aquel entonces, ellos no necesitaban
trabajar, sus tierras, sus minas y los excedentes del Estado, los alejaba del trabajo y los
acercaba al ocio) generando varios cambios. El primero (de ellos) fue que en Chile, y
América Latina en sí, se generó una nueva forma de organizar la economía. Como se
dijo, cae el modelo mono – exportador y fue reemplazado por el llamado ISI, modelo
basado en la sustitución de la importación y exportación, quien apunta hacia la
industrialización interna del país para dejar de depender de la economía mundial. Un
segundo momento, se da a partir de las luchas reivindicadoras de las clases trabajadoras

84
McGee, S.. (2000). Las Derechas. Las Extremas Derechas en Argentina, Brasil y Chile (p. 32).
Argentina: ed. Argentina.
85
Vergara & Barros. (1940). El Modo de Ser Aristocrático: El Caso de la Oligarquía Chilena hacia
1900 (p. 46). Chile: ed. Aconcagua.

48
y oprimidas, generando que para la fecha el Estado (a mano de Ibáñez del Campo)
comenzará con un proceso democratizador de la sociedad, integrando a esferas sociales
a la conducción del país. No obstante, para que este proceso funcionará se necesitaba
que la sociedad se mantuviera estable y que las clases de elites lo aceptarán, de tal
manera, para el año 1938 se crea un Nuevo Pacto de Dominación impulsado por el
Frente Popular (FP). Este pacto de dominación estableció que la clase terrateniente se
alejaba de ostentar el poder, siempre y cuando no se le quitarán sus tierras frente a este
nueva forma de organizar a la sociedad y la economía, además, no podían dejar que los
campesinos se sindicalizarán. No obstante, para el año 1967 fue roto este pacto de
dominación con la reforma agraria impulsada por la DC (Democracia Cristiana) que
establecía quitarle tierras improductivas a los terratenientes y dárselas a las clases
desposeídas (los sin casas en lo urbano y los sin tierra en lo rural) además, se establece
la Ley de Sindicalización Campesina. Esto último modifico, nuevamente el pacto de
dominación que ahora, y tras varios años del proceso democratizador y del modelo ISI
que por lo demás le daba centralidad histórica a la clase trabajadora, se alistaba Chile
para entrar en vías del socialismo, o por lo menos esas eran las luchas de las izquierdas
tradicionales. Sin embargo, esto se detuvo el año 1973 con la interrupción violenta de
los militares al poder del Estado, acabando por 17 años con la Democracia en Chile.
Durante este periodo, se desarrollaba una nueva forma de establecer la economía en
América Latina, propuesta e impulsada por EE.UU., y recibidas por los Chicago Boys y
Gremialistas en Chile, me refiero al neo – liberalismo, sistema económico basado en el
consumo individual de productos inventados y vendidos como necesidades.

Es así, como entonces, las nociones de la misma cultura también cambiaron,


comenzando un nuevo proceso que De Varine llamó como la fase de
mercantilización de la cultura. “Históricamente… implica la subordinación masiva de
los bienes culturales a la lógica del valor de cambio y por lo tanto, al mercado
capitalista, representa la principal contra tendencia frente al proceso de unificación y
centralización estatal que caracteriza a la fase precedente…g Esto significa una
cultura jalada simultáneamente por el Estado y por el mercado, no sólo nacional sino
también internacional”86.

86
De Varine, H. (1976). La Cultura de los Autores (p. 33). Paris, Francia: ed. du Seuil.

49
Es así como lo que se produce como arte, se transforma rápidamente en objeto
mercantil, ya que evoca a la particularidad del objeto, por lo que se hace indispensable
esta situación a la hora de proyectar a este objeto en el futuro como algo necesario de
conservar por su valor económico y no social, así una escultura o un cuadro de un pintor
renombrado tendrá mayor valor que una escultura o de una pintura de algún autor no
renombrado, a pesar de que estéticamente, la escultura o pintura del auto no renombrado
sea considerada mucho mejor, por lo que su conservación y mantención no se hará tan
eficaz con la del autor renombrado (recordar las memorias débiles y memorias fuertes).

De esta forma, el Patrimonio Cultural, como una extensión de la cultura, se va


produciendo y estableciendo, por las funciones hegemónicas que el Estado y la clase
dominante va produciendo a partir de los proceso capitalistas, a propósito de la creación
de un objeto mercantil, la cultura y el patrimonio como tal pasan a tener un lugar en las
intenciones de mantener la jerarquía social por parte de las clases dominantes. Por
consiguiente, se establece que los objetos mercantiles, que se valorizaron como tales en
función de la clase dominante, se han establecido como los bienes culturales a
resguardar y la noción de Patrimonio Cultural no escapa a eso, en consecuencia y
respondiendo la pregunta del enunciado, lamentablemente el Patrimonio Cultural si se
ha tornado hoy en día como una mercancía en función de los interés de las clases
dominantes.

3.4. La construcción del Patrimonio Cultural desde la Institucionalidad y los


movimientos sociales en torno a su concepción.

Se ha afirmado, hasta el momento, que el campo de la cultura ha adquirido nuevos


sentidos a partir del Capitalismo y la Globalización, ya que han transformado la
economía, y las relaciones sociales primordiales, para generar nuevas formas de
dominación justificadas mediante las políticas que el Estado crea. A través de esta
condición de entender la cultura se puede decir que la globalización ha intentado
generar un efecto homogeneizador, no obstante, al parecer este efecto homogeneizador
ha reactivado el rescate de la heterogeneidad cultural. Sin embargo, esta heterogeneidad
se ha puesto en servicio, muchas veces, en función del turismo, el cual ha
desfragmentado la memoria e identidad de la misma cultura. Al ser tan evidente esto, las
instituciones internacionales y nacionales han tenido que responder con políticas para
establecer su conservación.

50
En las políticas internacionales encontramos a las de la UNESCO (Organización de las
Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), organización especializada
en Cultura de la ONU.

“En las declaraciones y trabajos emanados de la UNESCO (UNESCO 1972, 1989,


1995, 2001, 2003) aparece como prioridad la creación de políticas relativas a la
cultura, en tanto promoción y defensa de la diversidad cultural, valorándola como un
espacio de posible solución para los problemas que se plantean en el orden económico
y político dentro del contexto de la globalización, así como un espacio de pluralismo y
afianzamiento democrático”87.

Como se vio anteriormente, estas propuestas provenientes desde la UNESCO, están


consignadas al modelo desarrollista que emprendió América Latina a comienzos del
segundo periodo del siglo XX. Si bien, se ha concretado la defensa de ciertas tradiciones
y prácticas culturales, se ha señalado también, que estarán en función de una promoción
de los bienes culturales para salir de la pobreza, donde grupos minoritarios de lugares
lejanos a las grandes ciudades han tenido la oportunidad de hacerse parte, sin embargo,
al estar representada por las políticas económicas capitalistas, el daño que genera a la
larga es mayor que lo que será considerado como retribución por la comunidad, por
hacerse parte de este modelo económico, ya que lo que antes estaba resguardado para
perdura y trascender en el tiempo, entrará en un estado de hibridez, como vimos con
Canclini, y transformará lo particular que había hecho a la comunidad algo singular
entre otros lugares.

No es hasta el año 2012, específicamente el 19 de junio, que a partir de la convención


para la Salvaguardaría del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO, celebrada el
año 2003, que el Estado de Chile modificará la Ley Nº 17.288 para incluir el resguardo
del Patrimonio Cultural Inmaterial de Chile, estableciendo la protección de prácticas
culturales, ritos, memorias, etc. como legado histórico.
87
Canalé, A.. & Morel, H.. (2005). Actores y Representaciones en la Patrimonialización de las
Agrupaciones del Carnaval Porteño (p- 15). Cuadernos de Antropología Social Nº 21. Publicación de la
Sección de Antropología Social, Instituto de Ciencias Antropológicas, Facultad de Filosofía y Letras,
Universidad de Buenos Aires.

51
Por otra parte, y en lo que respecta a los movimientos sociales a favor de que el Estado
reconozca ciertas prácticas culturales, objetos, inmuebles, etc., como Patrimonio
Cultural, es así como, “...hace muy poco tiempo que la defensa y el uso del patrimonio
se convirtió en intereses de los movimientos sociales (...) En años recientes, la
expansión demográfica, la urbanización descontrolada y la depredación ecológica
suscitan movimientos sociales preocupados por rescatar barrios y edificios, o por
mantener habitable el espacio urbano”89.

Bajo esta lógica, Florescano anuncia “... lo que antes se entendía como patrimonio
arqueológico, histórico y artístico, refiriendo usualmente a los testimonios de los
grupos dominantes y de la alta cultura (templos, palacios, centros ceremoniales,
objetos pertenecientes a los grupos altos de la escala social) actualmente se ha
extendido, comprendiendo los asentamientos campesinos, la habitación popular, las
tecnologías tradicionales, o la expresión de las mentalidades populares” 90. Sin
embargo, y como hemos revisado, lo que realmente se patrimonializará debe estar
sometido a la aprobación de los interés de las clases dominantes, por lo que estos
movimientos sociales que buscan estar reconocidos por el Estado, resultan desde la
necesidad de mejorar económicamente sus vidas, y no de la urgencia de resguardar
socialmente algo como sagrado. Un ejemplo claro de esto se encuentra emplazada un
dia antes de que se realizará el dia del patrimonio Cultural del año 2014, donde
agrupaciones de todo Chile, por la defensa de su Patrimonio Cultural, se reunieron y
colmaron la Alameda, para exigirle al Estado que reconociera que dentro de sus
comunidades y agrupaciones sociales existen valores que deben ser resguardados, sin
embargo, al interactuar con ellos se podía dar cuenta que buscaban que aquella
reivindicación para que aquel lugar que ellos representaban fuera a larga un lugar
turístico. Así lo testimonia Hugo Maygua Manco (Hombre de 57 Años, descendiente
quechua), proveniente de Chapiquiña (cerca de Arica) y que participo ese dia.
Estableció que su pueblo tenía una gran cantidad de objetos y memorias para que fueran

88
Ley chilena Nº 17.288.
89
Canclini García, N.. (1993). El Consumo cultural en México (p. 56). Canaculta, México: Consejo
Nacional para la Cultura y las Artes, Dirección General de Publicaciones.
90
Florescano, E. (1993). El Patrimonio Cultural de México (p. 15). México D.F.: Fondo de Cultura
Económica.

52
reconocidas ya que tras largas generaciones de acumulación, tenían y podían conformar
un museo, entre otras cosas, para que su pueblo fuera reconocido y que pudieran ir más
turistas (H. Maygua, comunicación personal, 24 de Mayo de 2014).

De esta manera Canclini lo advierte y estipula que, “En la actualidad, las diferencias
regionales o sectoriales, originadas por la heterogeneidad de las experiencias y la
división técnica y social del trabajo, son utilizadas por las clases hegemónicas para
obtener una apropiación privilegiada del patrimonio común … se consagra como
superiores ciertos barrios, objetos y saberes por que fueron generados por los grupos
dominantes, o porque estos cuentan con la información y formación necesaria para
comprenderlos y apreciarlos, Es decir, para controlarlos mejor”91.

De este modo, es mediante la activación que el poder del Estado tiene que se
patrimonializa un lugar, una práctica cultural, un objeto, una memoria, etc., a pesar de
que existan movimientos sociales que empujen a que sus sectores se han considerados
parte de ello, por que se podría decir que incluso, al tratar de estar moviéndose dentro de
las lógicas del Estado están siendo parte de lo que el poder quiere establecer, por lo que
se demuestra aun más el poder que el Estado tiene sobre el Patrimonio Cultural.

91
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas Perspectivas de Estudio (p. 18). España: Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.

53
Capítulo IV – Sectores Subalternos (Indígenas Huilliches) y la relación con la
imposición del Patrimonio Cultural proveniente desde el Estado y los intereses de
Clases.

4.1. El Patrimonio Cultural y las comunicaciones. Mecanismo para instalar el


discurso de la construcción del Patrimonio en la sociedad.

Se ha establecido en muchas oportunidades lo difícil que es hablar de lo que realmente


es lo Popular (aceptando que dentro de la sociedad actual, y por efecto de la tesis, el
sector Huilliche estudiado proviene de cierta manera de este sector). Se establece esta
situación, ya que hoy en día, muchos autores y gestores del Patrimonio Cultural se han
preocupado por resaltar esta situación en búsqueda de salirse de lo que
hegemónicamente se venía estableciendo hasta nuestros días. Sin embargo, nos
encontramos nuevamente con contradicciones en la formulación de proyectos
patrimoniales por no tener sustento teórico. Han obviado o dejado de lado, la
construcción simbólica local y han optado por el estudio de la construcción externa al
círculo comunitario. Dentro de todo Chile se resaltan pueblos con algún carácter
arquitectónico, tradiciones, prácticas culturales (como comidas o juegos típicos) para
poder conformar una identidad única que los diferencie de otros sectores sociabilizados.

A pesar de que si llegáramos aceptar que lo popular es todo lo que se ha creado fuera
de la clase hegemónica, las mismos mecanismos de control han hecho que la gente del
pueblo, dentro de sus propias practicas, se hayan pronunciado desde la construcción
moderna de la sociedad, es decir, principalmente por la forma de trabajo, la relación
trabajador/patrón y el consumo, creando una población masa, la cual actúa a partir de
las tendencias impuestas por el poder dentro de la sociedad. Pero, ¿Cómo se crea la
población masa (quienes son los que responden de mayor manera a lo popular) de la
sociedad en estos días entendiendo que las comunidades Huilliches estudiadas
responden a esta situación? Principalmente por la necesidad de poseer ciertas marcas
que darán cierto status, ya que muestra el nivel de consumo que tienen, y como se ha
visto, esto se proyecta a través del Capitalismo Neoliberal y la Globalización.

Por consecuencia, entre los cientistas sociales se ha señalado que la proyección de lo


que quiere la sociedad hegemónica para mantener su poder, se ha trasmitido a través de
54
las comunicaciones, las cuales y bajo esta condición, responden a instituciones de poder
que ayudarán a controlar la estructura social. Hoy en dia, en las comunidades rurales,
encontramos que su desarrollo social proviene en gran medida de lo que se muestra en
la televisión (principalmente) y otros medios de comunicación. Por esta razón, fácil es
ver que en lugares muy alejados de los centros ciudadanos se encentren grandes antenas
instaladas en casas que tienen más de 100 años, en algunos casos. Por lo tanto, para
poder comprender la relación de Patrimonio Cultural con lo que los sectores populares,
debemos entender, incipientemente, como se conforma hoy en día los mecanismos de
control a partir de la tecnología, los cuales crean la Cultura de Masas, antes de abordar
específicamente que es lo que se está patrimonializando de estas comunidades.

De tal forma, podemos decir que los medios de comunicación se han establecido
como instituciones económicas, sociales, culturales y por sobre todo de poder. El hecho
de idearlos como institución nos permite pensar en la relación que establecen con otras
instituciones, como la familia, la educación, la política, el poder, la ideología y la lucha
de clases. Por consecuencia, podemos decir que también son instituciones culturales que
producen mercancías, a partir de lo que se vende en sus emisiones y lo que buscan
provocar en las personas. Si bien su producto es simbólico 92, para Habermas “… la
posibilidad de distinguirse de los demás también tiene que ser reconocido por los
demás en contextos de interacción y comunicación, lo que requiere una
intersubjetividad lingüística que moviliza tanto la primera persona (el hablante) como
la segunda (el interpelado, el interlocutor)” 93. La comunicación, en cierto modo, juega
un papel decisivo en la construcción y reconstrucción de las identidades, funciona como
una máquina que va reproduciendo las identidades y moldeándolas, tanto individuales
como colectivas, y también, proyecta a la sociedad, que ve y se comunica a través de
estos medios, bajo las lógicas de control social.

Supuesto esto como institución, la comunicación entonces, proyecta un tipo de


realidad que se expresa en la dirección de la información avalando los intereses
culturales históricos. Por ejemplo, normalmente cuando se habla en las noticias sobre

92
Sierra Caballero, F.. (2000). Comunicación Educativa y Económica Política. Apuntes sobre Políticas
Culturales e Innovación Tecnológica (p. 26).
http://www.ull.es/publicaciones/latina/aa2000vfe/sierra.html.
93
Haberbam, J. (1985). El Discurso Filosófico de la Modernidad (p. 144). Madrid, España: ed. Taurus.

55
Patrimonio Cultural, se ha referido para marcar que cierto monumento o tradición
proviene de nuestra chilenidad, es decir, de nuestra identidad chilena, por lo que se está
reafirmando lo que supuestamente le pertenece a todos los chilenos. Así también, como
las mayoría de las noticias que se dan en torno al patrimonio, se han establecido a partir
del vandalismo que se le ha efectuado a un inmueble, sector patrimonial o tradición,
etc., generando un sentimiento de repudio ante este acto activando en muchas ocasiones
sentimientos nacionalistas, y no por que hayan sido o sean extranjeros quienes estén
atentando contra el patrimonio de Chile, sino también existe una amenaza interna
proveniente de los sectores no oficiales que no consideran por ejemplo, el Palacio
Cousiño o el Museo Histórico Militar como legado de un pasado común. Por otra parte,
y bajo las nociones capitalistas, se encuentra la función mercantilista del patrimonio
(como vimos anteriormente). En estos casos, las comunicaciones reproducen los
discursos políticos provenientes generalmente de las necesidades locales de generar
nuevos mecanismos de ingreso para un lugar determinado, generando de este modo, que
el Patrimonio Cultural se transforme en suvenir y así posicionarse en la carrera por
situarse en la vanguardia de los lugares más visitados.

Específicamente, y dentro de cómo las comunicaciones reaccionan ante el llamado de


las clases dominantes, preciso es hablar, primero, de cómo se construye la Cultura de
Masas y como se dirige la Opinión Pública a través de mensajes ocultos dentro de la
información que entregan las comunicaciones.

En primera instancia, Adorno advierte que la cultura de masa se construye a través de


tres pilares fundamentales: se presenta como una cultura comercial, una sociedad de
consumo y una institución en la búsqueda de la publicidad. Estos pilares, son los
fundamentos de nuestra representación en la sociedad actual, sin embargo, la cultura de
masa y estas representaciones no nacieron recientemente. Desde el siglo XVII (siglo
correspondiente a la época del barroco) la información ha sido dirigida para mantener a
la masa dominada bajo la elite, mediante la imposición de lo que es considerado cultura
en la época. De esta forma, las pinturas, la literatura, la poesía, entre otras expresiones
culturales, eran netamente representaciones para que las masas mantuvieran la
subordinación. Hoy en día, las herramientas de expresión cultural han cambiado, sin
embargo, siguen causando los mismos efectos en la sociedad. El cambio más
significativo, fue mirar las expresiones culturales como industria cultural, la cual busca

56
comercializar el arte considerándolo como un bien de consumo que debe ser masificado,
y las comunicaciones serán la herramienta más potentes para lograr esto. Es así como el
poder, que dirige su visión mediante los programas televisivos, por internet u otros
mecanismos de información, logran mantener un formidable control de las masas
consagrando su búsqueda al momento de debilitar las fuerzas de resistencia individual.
De algún modo, todo lo que se nos presenta a partir de las comunicaciones, está y estará
siempre predestinado. Así continua Adorno al refiere al mensaje oculto entregado en la
comunicación entendiendo esta censura de la información, dejando intrínseca la
intención por parte de la cultura dominante, por entregar un mensaje impregnando en
sus imágenes, sonidos y lenguaje elementos que nos parecen propios de lo cotidiano,
tales como edificios, calles, automóviles y todo lo que resulte a modo familiar con la
realidad, naturalizando los errores y contradicciones que puedan ocurrir a partir del
modelo político predominante. Para Adorno entonces, el sometimiento de la cultura de
masa, se genera a nivel mental, ya que es realmente donde el poder trabaja, dominando
totalmente al sujeto, predestinando sus opiniones. De tal forma, el poder logra que la
sociedad se reúna bajo sus propios principios manipulados, donde las normas sociales,
que fueron dadas en el desarrollo de la configuración de la estructura de la sociedad,
ayudan al sistema que se mantengan satisfactoriamente a partir de la subordinación de
las masas.

En segunda instancia, y como revisamos, las culturas de masas responden a las


relaciones de poder. Para comprender esta situación, Bourdieu estudia como dentro de
las mismas instituciones, sobre todas las comunicativas, se han transformado en un
monopolio frente a la generación de la cotidianidad y de los discursos expresados en
aquellos momentos de la vida94. Por esta razón, para Bourdieu es tan importante
comprender las relaciones de poder, ya que estas son las que configuran y estructuran el
funcionamiento mismo de la sociedad, de tal manera, se establece que las
comunicaciones guiarán la opinión pública. Es así que continua Bourdieu, establecido
que al momento de referirnos a las comunicaciones como herramienta de control de la
opinión pública, debemos entender a la imagen y el sonido como elementos utilizados
para llevar a cabo una censura inconsciente, la cual entendemos como la capacidad que
las comunicaciones tienen de desviar los acontecimientos, y moldearlos como al grupo
hegemónico le parezca, provocando así naturalizar los hechos ocurridos que se ejercen
94
Bourdieu, P. (1996). Sobre La Televisión (p. 20). España: ed. Angrama.

57
en el inconsciente de la sociedad. Bourdieu, en pocas palabras se refiere a la imagen y el
sonido como una herramienta poderosa que impregna la información en el sujeto. Por
otro lado Bourdieu, se refiere al lenguaje de forma clave, señalándolo como es una
herramienta poderosa al momento de ser divulgada la información con el fin
determinado en función de los intereses particulares del grupo dominante. Continuando
con Bourdieu, y así como Adorno, establece que existe un mensaje oculto en toda
función comunicacional, y que muestra lo que realmente se quiere para lograr el
dominio mental, ya que oculta realmente la realidad de los hechos. Para lograr que el
mensaje oculto, que se emite desde las comunicaciones, se interiorice en las
mentalidades, es necesario crear una fórmula que sea aceptada en la cultura de masa. Tal
formula es mostrar a la realidad de manera espectacular y dramático los hechos, para
generar una exageración de la gravedad de las imágenes de un acontecimiento (que
tanto fascina a las masas). De tal modo, las comunicaciones se construyen como un
producto para que las masas se movilicen o se desmovilicen, generado la dominación
completa. De forma tal, indica Bourdieu, las comunicaciones se convierten en el árbitro
del acceso a la existencia social y política 95. Ahora bien, y evocando nuevamente el
concepto de habitus, este autor nos establece que las estructuras simbólicas no circulan
libremente si no han sido retraídas, situando al capital simbólico entre los dedos del
poder. De manera tal, el mensaje oculto, que está presente en la información de las
comunicaciones, a partir del discurso político que se predestino dentro de este mensaje,
y que va configurando la opinión pública, va a crear un pseudo – realismo (como dice
Adorno), donde las personas creen opinar bajo sus propios argumentos, sin embargo
como se ha visto, no están haciendo nada más que reproducir lo que fue incluido en su
mente anteriormente.

Finalmente, la forma con que se construye la identidad dentro de los sectores


subalternos hoy en día, proviene también de esta instituciones de poder, ya que las
comunicaciones han llegado, gracias a las señales satelitales, a todos lados, incluso en
las comunidades estudiadas transformando su actuar y eso se deja ver muy fácilmente
dentro de sus relaciones sociales.

95
Bourdieu, P. (1996). Sobre La Televisión (p. 58). España: ed. Angrama.

58
4.2. ¿Qué patrimonializa la clase dominante y el Estado proveniente de las clases
no hegemónicas?

4.2.1. El capitalismo, el modo de producción y las prácticas culturales.

Se ha señalado que ciertas prácticas culturales provenientes desde el pasado y que


marcaron una localidad deben ser patrimonializadas a partir de valores que van
configurando desde la cotidianidad, intentando rescatar objetos y memorias para poder
generar una identidad local, y como se ha visto, generar una particularidad frente a la
heterogeneidad producía por el Capitalismo, la que sin embargo, será utilizada como
mercancía. Por un lado, se encuentran los lugares materiales donde fueron efectuadas
estas prácticas culturales, en donde se encuentran objetos y espacios que sirvieron
parapara el desarrollo de dicha actividad cultural. Por otro lado, se encuentran las
memorias, la que dependiendo del tiempo que haya transcurrido en trono aquella
práctica cultural, las personas que vivieron en su entorno han aportado a lo que se ha
establecido como el Patrimonio Inmaterial. Pero, ¿qué es realmente una Práctica
Cultural? , autores como Melucci96 y Pizzorno97 han planteado que los procesos de
decisión para hacerse parte de alguna practica cultural pasan a través de la construcción
social de la identidad, donde un sujeto ordenara las preferencias y escogerá entre
distintas formas de acción en función de su identidad. Según Giménez, “… es posible
imputar un determinado tipo de identidad a un actor social a partir de la observación
de ciertas características de su acción (sus preferencias, sus fines, sus estrategias, su
estilo, etc.) en un determinado contexto cultural” 98, de manera entonces que la
identidad, la cual es movible, dinámica, mutable y condicionada socialmente por la
alteridad, como vimos, va variando y siendo modificada mientras las prácticas
culturales se van desarrollando, por ende, tanto la identidad como la practica cultural se
van modificando a partir de esta reciprocidad que va construyendo finalmente un modo
de actuar a partir de un contexto histórico, social y culturalmente especifico. Por otro
96
Melucci, A.. (1985). El Desafío Simbólico de los Movimientos Contemporáneos. Revista de
Investigación Social núm. 4. 52, pp. 789 - 816.
97
Pizzorno, A.. (1986). En la Racionalidad de la Elección Democrática, En El Individualismo: Teorías
y Métodos. París, Francia: ed. FNSP.
98
Giménez, G.. (1996), La Identidad Social o el Retorno del sujeto en Sociología. En Identidad:
Análisis y Teoría, Simbolismo, Sociedades complejas, Nacionalismo y Etnicidad (p. 17). III Coloquio
Paul Kirchhoff. Universidad Nacional Autónoma de México. Mexico D.F.

59
lado, y siguiendo a Bolzman “… la ruptura de la vida cotidiana conduce a los actores a
redefinir los elementos que constituyen su estructura identitarias, respondiendo al
modo que ellos consideran como más adecuado a los requerimientos de la situación” 99.
Los sujetos, dependiendo de su situación, van aceptando los mecanismos de actuar en su
condición dependiendo del momento histórico que le ha tocado vivir, de manera que su
identidad se va adecuando a la acción cultural.

Por lo tanto, este modo de actuar o de acción cultura termina generando la practica
cultural, en medida que se configura una acción social. Para comprender esta situación
es imposible no establecer el modo de producción de cada práctica cultural, donde
realmente se encuentra la proyección de dicha práctica cultural.

Para comenzar, Marx examinó“…el sistema de la economía burguesa en el orden


siguiente: capital, propiedad Agraria, trabajo asalariado, Estado, comercio exterior,
mercado mundial. Siendo… las tres primeras situaciones son las que divide la sociedad
burguesa moderna”100 , de tal manera, se ha establecido que el modo de producción
puede ser definido como la forma en que los hombres, de una determinada época
histórica y sociedad, producen socialmente los medios de su subsistencia, es decir, la
época histórica será considerada como la sociedad, ya que es en donde se produce el
modo de producción, de este modo Marx ha establecido también que el modo de
producción será la estructura económica con que la sociedad se enfrentará a la
construcción de su realidad, generando posteriormente las contracciones y relaciones
simbólicas, en breves palabras; la identidad, la cultura, la memoria, entre otras. En
palabras de Marx, “estas relaciones de producción en su conjunto constituyen la
estructura económica de la sociedad, la base real sobre la cual se erige la
superestructura jurídica y política y a la que corresponden determinadas formas de
conciencia social”101. Por otro lado, el mismo Marx establece los componentes del
modo de producción. Por un lado se encuentran las fuerzas productivas y por el otro las
99
Bolzman, C.. (1996). El concepto de identidad. Reflexiones Teóricas a partir del estudio
del problema del Exilio, En Identidad: Análisis y Teoría, Simbolismo, Sociedades complejas,
Nacionalismo y Etnicidad (p. 159). III Coloquio Paul Kirchhoff. Universidad Nacional Autónoma de
México. México D.F.
100
Marx, K.. (1989). Contribución Critica a la Economía Política (p. 7). Santiago de Chile: ed.
Progreso.
101
Marx, K.. (1989). Contribución Critica a la Economía Política (p. 7). Santiago de Chile: ed.
Progreso.

60
relaciones sociales de producción. Para Marx, “en la producción social de la vida, los
hombres entran en determinadas relaciones necesarias e independientes de su voluntad,
ya que se encuentran dentro relaciones de producción correspondiente a un
determinado grado de desarrollo de las fuerzas productivas materiales”102.

No obstante, dentro de la concepción materialista, que Marx funda en relación con el


principio de producción y su distribución, el modo de producción daría origen al orden
social. Para entender cómo opera esto último, es necesario hacer un pequeño análisis de
cómo se funda esta noción. Por una parte, se encuentra el proceso de trabajo” que es
inherente a la generación de producción, el cual es “todo proceso de transformación de
un objeto determinado, sea éste natural o ya trabajado, en un producto determinado,
transformación efectuada por una actividad humana determinada, utilizando
instrumentos de trabajo determinados”103. Por otro lado, se establece que los medios de
producción están construidos por el “objeto” sobre el cual se trabaja, es decir, los
medios o instrumentos con que los operantes logran generar bienes de producción. Marx
bajo esta lógica ha señalado que existen los que controlan y los que no controlan los
medios de producción, siendo estos últimos lo que deben vender su fuerza de trabajo
para poder tener algún recurso de ellos para poder sobrevivir dentro del sistema
Capitalista, mientras los que controlan los medios de producción, gozan de las regalías
que los medios de producción arrojan desde la plusvalía, mantienen su control sobre la
sociedad, en otras palabras, ”en una sociedad concreta es posible verificar, en general,
que existen individuos que son propietarios de los medios de producción e individuos
que deben trabajar para aquéllos: los trabajadores”104, produciéndose entonces la
relación entre “explotador y explotado”. De modo que, “todo proceso de trabajo es
una estructura formada por tres elementos fundamentales: la fuerza de trabajo, el
objeto de trabajo y los medios de trabajo que establecen entre sí determinadas
relaciones. Ahora bien, los elementos más significativos del proceso de trabajo son los
medios de trabajo en sentido estricto. Ellos determinan el tipo de actividad que deben
realizar los individuos para la fabricación de los productos, determinando de esta
102
Marx, K.. (1989). Contribución Critica a la Economía Política (p. 7). Santiago de Chile: ed.
Progreso.
103
Althusser, L.. (1967). La Revolución Teórica de Marx (p. 136). México: Siglo XXI.
104
Harnecker, M.. (1994). Los Conceptos Elementales del Materialismo Histórico. (p. 26). México:
Siglo XXI.

61
manera el tipo de relación que se establece entre el trabajador y los medios de
producción”105, que como se ha dicho son controlados por la clase poseedora o dueña de
los medios de producción. Si bien, dice Marx, el control de los medios de producción no
es innato de la esencia humana, si se hace esencial entender el control que se provoca a
partir de la acumulación de los recursos provenientes de la “división social del
trabajo”, donde se ha establecido que se genera a partir de los diferentes quehaceres de
los individuos en la sociedad y que son realizados en función de su situación en la
estructura social.

Es así que el modo de producción de la vida material, y en palabras de Marx se


presentaría como el proceso que “condiciona el proceso de la vida social, político y
espiritual en general... Del mismo modo que no se puede juzgar a un individuo por lo
que piensa de sí mismo, tampoco se puede juzgar a semejante época de transformación
por su conciencia; es preciso, al contrario, explicar esta conciencia por las
contradicciones de la vida material, por el conflicto existente entre las fuerzas
productivas sociales y las relaciones de producción”.106

De esta manera, pareciera ser que en los temas patrimoniales, en su activación y en sus
estudios, no se ha considerado esta situación, ya que es muy recurrente ver lugares y
memorias, provenientes de prácticas culturales específicas, que se han tornado
Patrimonio Cultural, sin considerar su procedencia real a partir de las relaciones de
producción. Los ejemplos de esto último, serán desarrollados con mayor detalle a
propósito del fin de este trabajo que es analizar a la región de los Ríos bajo la lógica del
control cultural.

Entonces cabe la duda preguntar: ¿es posible establecer una práctica cultural como
Patrimonio Cultural si ésta proviene de las relaciones de poder que se han establecido en
la sociedad a partir de la penetración capitalista a propósito de las relaciones materiales
dentro de la sociedad?, desprendiéndose una nueva pregunta ¿es posible entonces, decir
que existe un pasado único que debe ser trasmitido generacionalmente, entendiendo que
si es patrimonializado una práctica cultural de una localidad en específico se está

105
Harnecker, M.. (1994). Los Conceptos Elementales del Materialismo Histórico. (p. 17). México:
Siglo XXI.
106
Marx, K.. (1989). Contribución Critica a la Economía Política (p. 8). Santiago de Chile: ed.
Progreso.

62
patrimonializando también las relaciones de dominación y control social que nacieron
en los procesos de trabajo y de relaciones de producción?

De tal forma, la situación de este apartado es incluir en la discusión patrimonial esta


nueva forma de concebir las tendencias con que se han patrimonializado muchas de las
prácticas culturales, y así complejizar los debates en torno a objetos, memorias y
prácticas culturales, antes de ser activados como Patrimonio Cultural.

4.2.2. El Patrimonio Cultural, el Estado y los pueblos Indígenas.

Se dijo en algún momento, la contradicción que se genera el establecer las tradiciones


de los pueblos indígenas parte del Patrimonio Cultura de una nación al mismo tiempo
que se están patrimonializando las prácticas culturales de aquellos que fueron sus
cazadores, por ejemplo; en Valdivia se ha proclamado monumento histórico los
torreones militares de las fuerzas realistas que fueron utilizados para protegerse de los
pueblos mapuches al mismo tiempo que se ha patrimonializado las identidades
provenientes de los indígenas Huilliches. Se dijo también, la necesidad, bajo el contexto
de la construcción del Estado – Nación, que tuvieron intelectuales y autoridades de
generar una ruptura con el pasado español a partir de establecer al pueblo indígena
Mapuche como el pasado criollo de Chile, y para poder generar una continuidad con el
pasado fuera del pasado monárquico, y así generar un Nacionalismo capaz de ir en
ayuda de la necesidad de arraigar a las personas a la incipiente nación. Así las
festividades y ritos del Pueblo Mapuche fueron adaptados por el Estado para establecer
el arraigo de las masas a la concepción de la nación de Chile y cortar con el pasado
monárquico.

A comienzos del siglo XX, la necesidad de rearticular el pasado mapuche con la


nación nuevamente surgió, ahora apoyado por el darwinismo social (Encina y Pinochet,
y principalmente Palacios) se comenzó a debatir la función de lo que Palacios estableció
como raza chilena, esta categoría, considerada hoy en día como una invención
intelectual107, dio lugar a la necesidad de reactivar la “emocionalidad de la patria”
luego de la Guerra del Pacifico, la Guerra civil de 1891 y el Centenario para generar una

107
Subercaseaux, B.. (2007). Raza y Nación: El caso de Chile. Santiago de Chile: A Contra Corriente.
Vol. 5.

63
mayor cohesión social, la que se había roto por los conflictos nombrados 108. De manera
que se puede ver como el pasado Mapuche, más que entenderlo bajo su propio
desarrollo, se le ha tomado única y exclusivamente como originador de un pasado para
el control social. Hoy en día la situación no ha cambiado, sobre todo si se entiende
como, por un lado, desde la institucionalidad, se ha buscado generar el apoderamiento
de las prácticas culturales del pueblo mapuche y de su identidad para que ciertos lugares
territoriales, como una región, pueda establecer una identidad que se proyecte en la
sociedad, tanto en el presente como en el futuro (como lo hizo la Región de los Ríos), y
por el otro lado, como los pueblos indígenas, no tan solo Mapuches, buscan ser
reconocidos por la institucionalidad demostrando la sumisión de su tradición a una
tradición más fuerte. Por ejemplo, nos dice Traversso, “En América Latina, durante las
celebraciones de los 500 años de descubrimiento, la memoria indígena se expresó como
una memoria antagonista directamente opuesta a la memoria oficial de los estados
surgidos de colonización y genocidio de las poblaciones indígenas”109.

Si bien, el Pueblo Mapuche, en relación con el patrimonio, estos no tienen la


concepción creada de este concepto como lo entendemos nosotros. Como se estableció
hace un rato, siguiendo a Lloren Prats, no todas las sociedades tienen la concepción de
Patrimonio Cultural formada, por lo que esta concepción no es inherente a todas las
culturas y sociedades del mundo. Siguiendo a Moreno, “la idea de conservar el
patrimonio es extraña para su pensamiento, ya que el tiempo se perciba de una
manera distinta. El pasado y sus antepasados conviven en el presente a través del
idioma, de sus vivencias cotidianas y rituales. Entonces, ¿Qué sentido tiene guardar y
exhibir un objeto antiguo en una vitrina?, el valor de un objeto tiene relación con su
uso en un espacio y significado determinado. Cuando ya no sirve este debe ser devuelto
a la tierra”110.

Por otro lado Canclini, nos dice que “En algunos casos, la persistencia de costumbres
y pensamientos antiguos puede verse como resultado del desigual acceso a los bienes

108
Subercaseaux, B.. (2007). Raza y Nación: El caso de Chile. Santiago de Chile: A Contra Corriente.
Vol. 5. 31.
109
Traversso, E. (2007). Historia y Memoria. Notas sobre un debate. En Historia Reciente. Perspectivas
y desafíos para un campo en construcción (p. 86). Buenos Aires, Argentina: ed. Paidos.
110
Moreno, T.. (2010). Hacia una Nueva Metodología de Trabajo. Santiago de Chile. Museos núm. 29.
P. 11.

64
de la modernidad111. Esto se produce considerando que la Globalización y el
Capitalismo han instaurado la idea de centro y periferia, buscando que todo se genere en
torno la centralidad territorial y económica. Por lo que los pueblos alejados de estos
centros económicos han podido conservar su tradición, la que de alguna manera, por la
llegada del Capitalismo se ha visto interrumpida por su lejanía. Si bien, se considera que
esto es bueno culturalmente hablando, socialmente se han visto en la obligación de
emigrar de sus espacios integrándose a las vidas urbanas para poder salir de la pobreza
(esto último, lo consideran así porque a pesar de que no ha llegado lo material del
Capitalismo, en extremos rigor, si ha llegado la mentalidad que empuja y que se
encuentran que ellos mismos se consideran pobres.

Para finalizar, hoy en día, es difícil hablar del Pueblo Mapuche y de su tradición como
Patrimonio Cultural y como aportador de identidad de algún territorio en específico,
porque por un lado, la hibrides, como dice Canclini, ha generado que se pierdan
expresiones básicas de su cultura, además, por ejemplo, en el caso de la Región de los
Ríos, la mayoría de las comunidades mapuches que habitan en esta región, ya no lo hace
en sus tierras sagradas, ya que todas han sido quitadas expropiadas desde que llegaron
los españoles, generando la perdida de la estructura social y cultural.

111
Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En Cuadernos Patrimonio
Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 112). España. Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.

65
Capítulo V – El Patrimonio Cultural de la Región de Los Ríos y Las
Contradicciones Culturales. El Patrimonio Cultural desde “arriba” y desde
“abajo”.

5.1. La clase dominante de la Región de los Ríos y su pasado. Españoles y


Alemanes, el Patrimonio Cultural desde “arriba”.

Como se estableció en algún momento, la Región de Los Ríos escogió establecer el


pasado español y alemán como los pasados que le darán la identidad a la región.

Se instituyó que lo patrimonializado, proveniente de lo español, fuesen,


principalmente, las grandes casas que el sector dominante ocupaba en momentos
históricos específicos y los fuertes de defensa para piratas y mapuches. Ahora surge la
interrogante; ¿Por qué se escoge este pasado?, en primera instancia se puede decir que
la clase dominante local de la región proviene de este sector. Por un lado, los grandes
fundos que se encuentran aquí, proceden de las colonizaciones, primero españolas y
segundo alemanes (y otros europeos, como franceses, galeses, suizos, entre otros), y
posterior, son también quienes impulsaron las empresas productivas en este sector, a
propósito de la necesidad de pacificación de la población indígena y la necesidad de
tener nuevas formas productivas modernas que ayudara a Chile a entrar en la
competencia económica mundial, surge la interrogante; ¿Cómo se establecieron estos
dos sectores en el territorio que hoy ocupa esta región?, comenzaremos con los
españoles.

5.1.1. Los españoles.

La primera ciudad fundada en este territorio fue la Ciudad de Valdivia, la que


corresponde a unas de las primeras ciudades creadas por las órdenes de Pedro de
Valdivia. Las primeras nociones escritas que se tienen de Valdivia están integradas en el
libro “Historia relación del Reino de Chile y las Misiones y Ministerios que ejercita en
la compañía de Jesús (1665)”, escrito por Alonso de Ovalle, donde por lo demás, se
establece que el Almirante Juan Bautista Pastene fue el primer español en divisar, en
1544, la desembocadura del Rio Valdivia o Ainilebu (como era llamado por los
indígenas) en las localidades de Corral y Niebla. Juan Bautista Pastene fue enviado por

66
Valdivia a reconocer al sur luego de su expedición hacia el Norte de Santiago que
culminó con la fundación de la Ciudad de La Serena, el mismo año que se divisó el Rio
Ainilebu. No obstante, no es hasta el año 1552 cuando se funda la Ciudad de Valdivia en
honor a Pedro de Valdivia.

De aquí para adelante, prácticamente la dominación española del territorio fue


completa, sin embargo, entre los años 1598 y 1684, a partir del levantamiento general
mapuche que en 1598, dirigido por Pelantaro, destruyo a las fuerzas realistas en la
Localidad de Curalaba, siendo el gobernador Oñes de Loyola quien sufrió la ira de los
Mapuches112. Este enclave era muy importante, porque junto a los que se habían
instalado en la gran Isla de Chiloé controlaban a los barcos que transitaban por el Cabo
de Hornos, de manera, por su valor estratégico, Valdivia dependía directamente del
Virreinato del Perú y no de la Capitanía General de Chile. Por otro lado, muy
importante era esta zona, porque hacia la cordillera se encontraban asentamientos
mapuches con gran tradición maderera, como es el caso de Localidad de Quinchilca
(actualmente la Ciudad de Los Lagos) donde se registra la llegada de grandes balsas
hechas con troncos las cuales viajaban desde la cordillera por lagos y ríos 113. Así la
dominación española se prolongó por la región hasta el siglo XIX, específicamente
hasta 1820 cuando el Almirante Thomas Cochrane logró desarticular el complejo de
defensa hispánica de Corral entrando así a Valdivia, y proclamándolo ajeno a la
dominación Monárquica Española. Ahora bien, las granes bienes materiales que fueron
activados como Patrimonio Cultural en la región, proveniente de este sector, emanan del
sistema defensivo que los españoles instalaron para poder defenderse de Mapuches,
piratas y corsarios (holandeses, ingleses y franceses), que venían en barcos. Este
complejo defensivo corresponde a los fuertes de Niebla, San Pedro de Alcántara de
Mancera, San Carlos, San Sebastián de La Cruz, San Luis del Alba de Amargos, San
José de Alcudia, El castillo San Luis del Alba y los torreones Los Canelos y Picarte,

112
Bengoa, J.. (1996). Historia del Pueblo Mapuche: siglo XIX y XX (p. 38). Santiago de Chile: ed. Sur
113
Practica antigua que siguió funcionando en el Rio San Pedro hasta la llegada de los ferrocarriles. Sin
embargo, en ríos que no existían caminos ni ferrocarriles, se siguió esta práctica hasta bien entrado el
siglo XX. Así lo atestigua, don Zenon Baeza, persona que trabajo en el puerto lacustre como extractor y
cargador de madera y quien además es uno de los últimos transportadores de madera en balsas de la
región, quien el 29 de enero de 2014, nos dice que “cuando no habían caminos en el Rio Trafun y en el rio
Remehue, en el año 1955 y posterior al riñihuaso (1960), trabajé varias veces bajando las balsas de la
cordillera”.

67
todo ellos construidos esqueléticamente de madera nativa (Roble – Coihue – Alerce) y
revestidos en piedra. Estos ya eran considerados Patrimonio Cultural de Chile antes de
que fueran integrados también al Patrimonio Cultural de la región.

5.1.2. Los alemanes.

5.1.2.1. La colonización alemana del siglo XIX.

El otro actor que es elegido como pasado regional proviene de los alemanes que
llegaron el siglo XIX. Por un lado, este sector rápidamente se volvió la clase de elite del
territorio y en nuestros días, son quienes tienen las mayores extensiones de tierras y
maquinarias productivas de toda la región. Por estas razones, no es impensable que lo
que ellos quieran patrimonializar provenga desde esta parte ya que son ellos mismos los
que quieren darle continuidad a su historia y además, para el mundo estatal y capitalista,
el pasado alemán es más valorado que el indígena. A pesar de lo anterior ¿Cómo y por
qué llegaron a Chile en el siglo XIX, y como se volvieron una clase de elite?, pasemos a
ver.

El presidente que estaba a cargo de la dirección del país, al momento de que llegaran
los europeos, era Manuel Bulnes (1841 – 1851), quien había sido un militar destacado
durante la emancipación de la monarquía española y ganador de la guerra contra la
confederación Perú – Boliviana en la década del 30. De corte conservador, aceptaba la
imposición del poder para el orden social como también la modernización de los
métodos productivos de Chile, considerando de extrema urgencia la necesidad de poder
integrar de manera efectiva los territorios que se encontraban alejados, como son el caso
de la región de Los Lagos, Los Ríos y Atacama en aquel entonces. De esta manera se ha
establecido que su gobierno se centró en cuatro pilares fundamentales, el de
colonización, Pacificación, Educación e Internacionalización de las ideas modernizantes
provenientes principalmente de Francia e Inglaterra.

Durante este periodo, las relaciones internacionales estaban pacíficas. A lo que


respecta al interior de Chile, nuevas provincias comenzaron a surgir, como son el caso
de Valparaíso (1842) y Atacama (1843), como resultado del proceso anterior.

En 1851, Bulnes deja el poder y llega Manuel Montt, antiguo ministro de Bulnes, sin
embargo, su ascenso fue apoyado por los conservadores, reconociendo que Bulnes
ejerció políticas liberales. De tal forma, Manuel Montt continúo con la llamada

68
Republica Conservadora, continuo con la modernización de los modos productivos y
además de obras públicas, siendo la inclusión del ferrocarril (incluyendo la Estación
Central) y la fundación de ciudades (entre ellas, Puerto Montt y Puerto varas) su
principal preocupación. Por otro lado, en el año 1855 mando a que Andrés Bello a que
creara un código civil dando origen al Código Civil de Chile (código napoleónico)
dejándose entrever la noción civilizadora que existía en Chile (importante esto porque
es bajo esta noción que se genera la relación con las comunidades indígenas en el sur de
Chile). En el año 1856 se presentó un gran problema político bajo su gobierno, me
refiero a la Cuestión del Sacristán, que debilito al partido conservador y lo dividió,
generándose dos bandos, los que apoyaban al gobierno y otros, que se aliaron con los
liberales, creándose de este modo la fusión Liberal – Conservadora, apoyada por
también por el Partido Radical (quienes en 1859 habían participado de la guerra civil de
aquel año para terminar con el Conservadurismo), que llevaría a la presidencia a José
Joaquín Pérez el año 1861.

Ahora bien, y en lo que respecta la llegada de los alemanes a Chile, internamente, los
territorios donde serían ubicados eran sumamente importante poseerlo para el Estado de
Chile, y no tan solo porque Argentina miraba hacia el otro lado de la cordillera, sino
porque las nociones de progreso y de modernización del país necesitaban nuevos
espacios productivos, a propósito de querer mejorar la raza chilena, la cual para la
época, era alcohólica y llena de vicios, recordando que la raza de Chile fue generada
desde el mundo mapuche para establecer una línea de diferencia contra el pasado
monárquico. “En el período entre la expulsión final de las fuerzas realistas en 1820 y la
llegada de los primeros inmigrantes alemanes en 1850, la región sufría una aguda
decadencia económica y social por su aislamiento geográfico de los núcleos
administrativos del Chile central”114.

Por otro lado, en Europa también estaban pasando transformaciones políticas, sociales
y culturales. La más significante se da, primero, a partir de la Revolución Industrial
inglesa que modifico la vida rural y urbana. Esta última comenzó a concentrar a grandes
poblaciones provenientes del mundo rural, lo que género, el vaciamiento de los
trabajadores en los campos desarraigándolos de sus costumbres generacionales, y por el
otro, el empobrecimiento de estos en las ciudades, ya que los nuevos trabajos ofrecidos

114
Bengoa, J.. (1996). Historia del Pueblo Mapuche: siglo XIX y XX (p. 50). Santiago de Chile: ed. Sur

69
era remunerado a muy bajo costo. Estas dos situaciones pronto traería consecuencias,
pero antes una nueva situación marcaria la llegada de los alemanes. En 1848 se produjo
la Revolución conocida como “la primavera de los pueblos” en Francia, la que
repercutió en toda Europa, y específicamente en Alemania. Este movimiento, afecto
directamente a que en Alemania naciera una conciencia de impopularidad frente al
emperador prusiano, llamado Francisco José I de Austria, a través de ideas liberales y
nacionalistas movilizadas por burgueses. Antes, las monarquías ya habían advertido esta
situación, como es el caso de la Santa Alianza entre Francisco I de Austria, el
rey Federico Guillermo III de Prusia y el zar Alejandro I de Rusia, la que después se
unió Inglaterra (cuádruple alianza), y posteriormente Francia cuando retoma la
monarquía (quíntuple alianza)115. De esta forma, estas pueden ser las principales causas
que gatillaron la decisión de los alemanes en venir a Chile.

5.1.2.2. Las políticas de Chile frente a la colonización.

Bajo las políticas inmigratorias que Chile estableció para la llegada y estancia de los
europeos resaltan dos muy importantes, la primera es la “Ley de Inmigración Selectiva”
en el año 1845 y la “Ley de Naturalización” el año 1856”. La importancia de la primera
ley, es que se autoriza a que en Chile sean donados territorios (en distintas partes del
país) para que los europeos pudiesen hacer uso de ellas.

En el artículo uno de esta Ley, se establece que se autoriza al Presidente para que
disponga de seis mil cuadras para la creación de colonias de extranjeros que vengan a
Chile a ejercer alguna “industria útil”, entregándole además, auxilio de útiles, semillas,
herramientas, dinero, entre otras cosas, para su instalación y para un futuro próspero en
aquellos territorios. En el siguiente artículo se expresan la cantidad de terrenos que cada
familia tendrá. Por cada padre de familia se entregaran no más de 25 cuadras y no más
de 12 cuadras a cada hijo mayor de diez años. Continuando, en el artículo 4 de esta ley,
se establece que no se pagaran impuestos durante los primeros 20 años, contando desde
la fundación del fundo, las contribuciones de diezmo, catastro y alcalaba (impuesto
local) serán voluntarias. Se estipula además, que todo colono es chileno declarándose
así frente a las autoridades que el gobierno señale en los lugares que se dispondrán las

115
Hobsbawn, E.. (1998). La Era del Capital 1848 – 1875. España: ed. Crítica.

70
colonias. Toda esta estabilidad prometida, económicamente hablando, salía del tesoro
público como establece el artículo 3 de esta misma ley.

Por otro lado, y a pesar de que en la Ley de Inmigración Selectiva se expresaba que los
colonos eran chilenos frente las autoridades, no es hasta el año 1856 cuando se
naturalizó a los colonos. De esta forma, “La Ley de Naturalización” estable que,
siguiendo el artículo 5 de la ley de 1845 anteriormente dicha, que los extranjeros que
quieran naturalizarse chilenos, deben hacerlo manifestándose en las municipalidades
correspondientes donde ellos residen, donde esta municipalidad levanta una declaración
que deberá llegar al Ministerio del Interior quien derivará la petición al Senado, el que
le hará llegar la respuesta al presidente de la Republica el cual emitirá dicha carta de
naturalización, haciendo que le extranjero sea traspasado como chileno.

Desde esta última ley, se han dispuesto una variada gama de otras leyes, ya que se
originaron problemas en las interpretaciones de las leyes por parte de los reclutadores de
colonos, aun así, todas las peticiones efectuadas por los colonos alemanes fueron
aceptadas mediante decretos de Estado, demostrando como éste ayudó en todos los
ámbitos para que los alemanes se establecieran en Chile, y así se convirtieran
rápidamente en una clase de elite. Es por esta razón que estas dos leyes que se han
mencionado consideran las más importantes frente a llegada de estos colonos, ya que
marcan realmente la disposición que el gobierno tenía frente a su llegada y permanencia
en Chile.

5.1.2.3. La ocupación de los territorios.

Se ha mostrado en la historia oficial que en estos sectores prácticamente no había


habitantes a la llegada de los alemanes, no obstante, esto no era así. Existían
comunidades indígenas, y pequeñas localidades de chilenos habitando estos lugares,
¿pero por qué no fueron estos últimos los encargados de mejorar el futuro económico de
la región?, la razón es porque se estableció que se necesitaría mano de obra calificada y
especializada en algún trabajo artesanal. Por estas razones se estableció que estos
territorios estaban “desprovisto de la preparación necesaria para generar los
resultados deseados por el gobierno: el sembrado de nuevos cultivos agrícolas, la
creación de industrias y el desarrollo económico del país en general, para conectar

71
dicho territorio con mercados nacionales e internacionales”116. Así mismo, bajo las
nociones de civilización y barbarie traídas desde Europa, se le miraba a los indígenas
como un obstáculo al programa nacional ya que estos, según su cosmovisión de vida no
tienen tendencias de acumulación, ya que su producción es para sobrevivir, por tal razón
era que a los europeos se les miraba como los pobladores y residentes ideales para
lograr el cometido modernizante de Chile.

A partir de esto, mediante un ambiente tenso, nacieron empresas que ayudaban a la


publicidad y tramitar la inmigración, tanto alemanas como chilenas (y de otros países
latinoamericanos), estas últimas establecían que “El gobierno y el pueblo chilenos
otorgarían generosa hospitalidad a los inmigrantes, respetando el carácter propio de la
colonia alemana y permitiéndoles que sus instituciones se desarrollaran libremente sus
actividades”117. Específicamente para su publicidad en Alemania, se realiza a través de
dos instituciones privadas la “Asociación de Berlín para la Centralización de
Emigración y Colonización Nacional” y a la “Asociación para Emigración y
Colonización Nacional de Stuttgart”118.

Ahora bien, tanto el gobierno Chileno como los inmigrantes proponían


responsabilidades antes de efectuarse la emigración, siendo en primera instancia
Bernardo Philippi el encargado de Chile en Alemania. Por un lado, el Gobierno de Chile
establecía la entrega de terrenos estatales en las cercanías de Chiloé, Llanquihue y
Valdivia. Revocaba los impuestos de los inmigrantes durante los primeros 20 años, y
también, les entregaría profesionales (doctores y profesores, como también sacerdotes
católicos) para el inicio de las colonias.
De las obligaciones que corresponden a los colonos, estos debían tener ahorrado un
capital para su mantención durante el primer año, se estableció que debían juntar 15
pesos por cada cuadrada que el Gobierno de Chile le entregaría. Por otro lado debían
demostrar que traían instrumentos y herramientas desde Alemania, además, tenían que
ellos mismos preocuparse de su establecimiento en el lugar, es decir, debían por si
116
Hobsbawn, E.. (1998). La Era del Capital (p. 51). 1848 – 1875. España: ed. Crítica..
117
Krebs Kaulen, A.., Tapia Guerrero, Ú.. & Schmidt Anwadter, P.. (2001). Los
Alemanes y la Comunidad Chileno - Alemana en la Historia de Chile. Santiago de Chile: Liga Chileno-
Alemana.
118
Steenbuck, U.. (2001). Inmigrantes Alemanes rumbo a Chile en el siglo XIX. En Desde Hamburgo a
Corral, Diario de viaje a bordo del velero Hermann (p. 35).Santiago de Chile: Pehuén Editores.

72
mismos despejar los terrenos de la gran selva nativa que se encontraba en estos
territorios. Por otro lado, y como al Gobierno de Chile le preocupaba también “mejorar
la raza”, luego de que los alemanes se asentaran tenían que renunciar a su antigua patria
y hacerse chilenos para siempre119. Existen un sinfín de medidas más que se debían
cumplir, tanto el Gobierno de Chile (como la construcción de caminos y el guardado de
artículos que no tenían el carácter de inmediata necesidad), como los almenas, no
obstante, lo principal de todo esto es el cómo el gobierno de Chile abrió las puertas para
que un sector proveniente fuera de Chile pudiera transformarse rápidamente en elites
dentro de la sociedad. Ahora bien, y según el Gobierno de Chile, las personas dispuestas
a venir eran personas que tenían medianas fortunas120, “predominaban entre ellos los
agricultores y artesanos especializados, marcando así cierta homogeneidad
profesional. También, la gran mayoría estaba constituida por familias jóvenes” 121. Por
otro lado, en discrepancia con la estereotipada imagen de que el gobierno intentaba
mostrar por parte de los alemanes, que los convertía en una especie de héroes para el
territorio, y héroes ya que se afrentaban sin recursos a la más cruda naturaleza, sin
embargo, “eran pocas las familias que llegaron con escasos recursos” 122. Uno de los
más famosos colonos de Valdivia era Carlos Anwandter quien había sido un burgués
adinerado en Alemania, el cual “traía su fortuna y le otorgaba préstamos a los
compatriotas que no disponían de fondos para sus iniciativas”123.

119
Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 38. Santiago de Chile:
Archivo Emilio Held Winkler.
120
Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 41. Santiago de Chile:
Archivo Emilio Held Winkler.
121
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 52.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext
122
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 52.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext
123
Blancpain, J.. (1985). Los Alemanes en Chile (1816-1945) (P. 73) .Santiago de Chile: ed. Hachette.

73
5.1.2.4. Los sentimientos escondidos de los inmigrantes.

Para el Gobierno de Chile, y siguiendo a Vicente Pérez Rosales quien fue el encargado
de la colonización después de Phillipi, la llegada de los alemanes "Era, pues,… la
benigna visita que le hacían las luces, las artes y las riquezas materiales a Chile, para
sacarla de la postración en la que se hallaba124"

Así mismo, y siguiendo a Carlos Anwandter establecían que ellos serán (los
alemanes) “… chilenos honrados y laboriosos como el que más lo fuere. Unidos a las
filas de nuestros compatriotas, defenderemos nuestro país adoptivo contra toda
agresión extranjera con la decisión y la firmeza del hombre que defiende su patria, a su
familia y a sus intereses. Nunca tendrá el país que nos adopta por hijos, motivos de
arrepentirse de su proceder ilustrado, humano y generoso125”.

Sin embargo, estas situaciones se expresaban aparentemente desde la necesidad de que


los alemanes fueran reconocidos como parte de Chile rápidamente, ya que la condición
de su verdadera manera de ser proviene desde otras aristas. Para comenzar, la primera
motivación para irse de su país y aceptar el nuevo fue mejorar su vida económicamente,
nada del otro mundo, no obstante, y bajo la búsqueda de mejorar sus vidas, también
buscaban poder y reconocimiento. De manera que los alemanes que llegaban, venían
con dos sentimientos expresados en sus ideas que marcaban su actuar frente a la
sociedad. El primero tiene que ver que ellos no venían a ser trabajadores de otros, sino
que venían a ser sus propios patrones126, generando un segundo sentimiento, el cual era
el de la ambición127.

124
Perez Rosales, V.. (1935). La Colonización de Valdivia y Llanquihue (P. 41). Valparaíso. Chile: Soc.
Imp. y Lit. Universo.
125
Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 98. Santiago de Chile:
Archivo Emilio Held Winkler.
126
Young, George F.. (1974). The Germans in Chile: Immigration and Colonization,
1849-1914 (p. 77). Staten Island, N.Y.: Center for Migration Studies.
127
Blancpain, J.. (1985). Los Alemanes en Chile (1816-1945) (p. 71). Santiago de Chile: ed. Hachette.

74
Bajo estas condiciones el artículo “Desmitificación del Inmigrante alemán en Don
Helmuth, el colono” de Valko, Jennifer M. (2010)”, demuestra cómo se encuentra en el
imaginario de los alemanes estas distinciones al analizar el libro escrito por Carlos
Fuenzalida Valdivia el año 1960, llamado “Don Helmuth, el colono”. Bajo este análisis
se destaca el imaginario inicial antes de la inmigración, que los alemanes tenían en el
cual se establece que “si se es laborioso, es posible hacer fortuna y, con un poco de
suerte, mejorar la situación social. Revela también un prejuicio de parte del alemán:
convertirse en “caballero respetable” implica ser “adinerado”128. Por ende, desde un
comienzo la necesidad de progresar económicamente y luego socialmente era un anhelo
que podía alcanzarse si se lograba inmigrar. Cuando los alemanes ya se encontraban
asentados, ayudados económicamente por el gobierno de Chile, se comenzó a expresar
el afán de poseer más, de tal manera, y bajo la imagen de Don Helmuth, nacen nuevas
“formas… de apropiación de la comunidad alemana que la historiografía apenas
menciona: el robo, el asesinato, la estafa, el soborno y la explotación de autoridades
corruptas”129. Se establece de esta manera, que en el libro existen tres situaciones que
marcan la codiciosa exagerada por parte de los alemanes. La primera situación que se
da, es el engaño que Don Helmuth le hace al Cacique Peñalemuñín (dueño de tres mil
hectáreas) cuando éste le presta dinero y ante el notario le sube la cantidad prestada
poniendo la finca del indígena como aval de pago, posteriormente a esto, es asesinado el
cacique por parte de un cuatrero por encargo del alemán, para que esta situación no
saliera a luz, dando como resultado; que las tierras del indígena quedaran a manos del
europeo. Esta situación demuestra también, como las autoridades de la época estaban en
pro de los alemanes, condición dada a partir de la situación anteriormente mencionada;
sea necesario desaparecer a los indígenas porque estos eran una piedra en el camino del
progreso y la modernización. Un siguiente episodio se da bajo las situaciones ilícitas
que los alemanes hacían para poseer más, ahora el protagonista le compra a muy bajo
costo, prácticamente estafándolo, las tierras del mejor amigo de uno de su hijo, ya que
estaba sumergido económicamente a partir de su situación derrochadora. Por último, se

128
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 55.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext
129
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 56.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext

75
establece como el alemán consigue nuevas tierras, ahora del indígena Colún, para
lograrlo, “el alemán acude al Ministerio de Tierras, donde obtiene una orden de
enajenación y la ayuda de soldados para cumplir el mandato”130. De esta forma, se deja
entrever nuevamente como el Estado de Chile ayudaba a los alemanes en contra de
cualquier situación, para hacerse con más tierras convirtiéndolo en un oligarca en pro de
lo que la clase dominante chilena establecía para el futuro del territorio y de Chile 131.
Concluye este articulo el autor diciéndonos entonces que, Esta la “novela de
Fuenzalida estimula entonces una reevaluación de la interacción entre pueblos
originarios y minorías inmigratorias, y las obligaciones gubernamentales respecto al
pasado fundacional y el porvenir de nuevos paisajes culturales nacidos de los procesos
de migración y desplazamiento voluntario y forzado de etnias locales y extranjeras”132.

De esta manera, la presencia de los colonos alemanes en Chile no viene por


casualidad, sino que se establece bajo términos concretos para que estos pudieran llegar.
Por un lado, el Gobierno de Chile, les ofreció un futuro que jamás hubieran logrado en
su patria, además, las condiciones políticas y sociales de Europa para la fecha ayudaron
a que los colonos alemanes pudieran atreverse a venir a Chile. Por otro lado, la codicia y
la ambición, apoyada desde el gobierno originó que pudieran establecerse como una
elite para poder impregnar a la sociedad chilena, sus costumbres “superiores” de vida,
como son las de trabajar duramente y lograr generar riquezas, ya que para el imaginario
de ellos, las conservación de su futuro es a través del trabajo duro el cual los
conformaba como hombres virtuoso que los hacía superiores a otros. De tal forma, fue
la población mapuche la que sufrió las arremetidas de este sector socavando su historia
a un pasado ya desprovisto de igualdad.

130
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 58.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext
131
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. P. 59.
http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext
132
Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el Colono de Carlos
Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I Seminario. East Carolina University. Pp. 67
- 68. http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-68482010000100004&script=sci_arttext

76
5.2. El pueblo Huilliche. La construcción del Patrimonio Cultural desde “abajo”.

Para poder comprender, finalmente, cómo el Patrimonio Cultural actúa y se desarrolla


dentro de las comunidades rurales e indígenas, teniendo claro, que dentro de su
concepción, como se ha visto, no existe esta noción, por lo que por efecto de esta tesis
se aceptara que la construcción patrimonial de estos sectores, es a partir de sus formas
de expresarse en comunidad y en comunión con sus creencias relacionadas con el
equilibrio, con la tierra y el territorio, además de su construcción básica familiar, donde
también se localizan las relaciones sociales propias, donde además se encuentran las
prácticas culturales que provienen desde la relación del trabajo y el modo de producción
que genera símbolos particulares y singulares que pueden ser considerados como
sagrados para que no se pierdan tras la penetración del Capitalismo dentro de sus
círculos de vida.

De esta manera, y para comprender de mejor forma cómo las comunidades estudiadas
forman, analizan, proyectan lo que ellos consideran como sagrado, o aceptan o rechazan
lo que se les ha impuesto (desde la institucionalidad y el poder del Estado) como
Patrimonio Cultural y las contradicciones que genera esto, es necesario primero
comprender la configuración social, territorial y cultural del pueblo Mapuche Huilliche.

5.2.1. Su relación con la tierra y el territorio.

Los primeros datos que se poseen del Pueblo Mapuche – Huilliche aparecen
nombradas desde el siglo XVI. Las crónicas de Bibar, Goiceta, Góngora y Marmolejo,
Mariño de Lavora escribieron un sinfín de relatos de los habitantes que había cuando los
españoles llegaron a ocupar lo que hoy es la Ciudad de Valdivia133.

Ahora bien, el término mismo de lo que se refiere por “Huilliche” (que significa en
shusgun; dialecto derivado del mapudungun que hablan los Huilliches, “gente que
habita en el sur”) varios autores han tratado de establecer lo que realmente es. Por el
lado, de Latchman, establecía la tradicional tesis de que el término Huilliche había sido
dado por los españoles para diferenciarlo con los que habitaban desde el norte. Por otro
lado, María Ester – Grebe, señala que el término mapuche y en especialmente Huilliche,

133
Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 16). Valdivia, Chile:
Imprenta Austral.

77
son términos genéricos y que se fue dando a partir de su propia transmisión oral 134. Por
otro lado, los Mapuches - Huilliches le denominaban al territorio que transitaban como
Huichan Mapu o Butahuillimapu, “gran territorio del sur” el cual se extendería
históricamente desde el rio Tolten hasta Chiloé, existiendo dentro de este mismo
territorio diferentes grupos Huilliches con distintas características, entre ellos, los
“cuncos” y los “Huilliches serranos”135.

De esta manera, podemos decir que la dominación Huilliche no responde a una


definición étnica, una distinta a la gente que vive en dirección norte, sino que sería
simplemente una definición geográfica de un gran pueblo que habita o habitó todo Chile
con una orientación, dependiendo de la ubicación de donde se encuentra emplazada su
cultura, es decir, teniendo estrecha relación con el territorio que habita. Por otro lado,
para comprender de buena manera esto último, muy importante es tener claro el
concepto de territorio. De este modo, preciso es decir, que muchas son las definiciones
para este concepto, no obstante, y bajo la necesidad de esta tesis, se prefiere mencionar
los que están relacionados directamente con la construcción social. Así, Según, Milton
Santos (1990) y Marcelo Carmagnani (1988), el territorio es la construcción del echo
social, es decir, donde se construye el espacio social, posibilitando al ser a ser
productor y producto en los resultantes de los procesos históricos, a propósito de la
concepción de “tierra” que los Huilliches poseen la cual, “no es solo la superficie del
suelo, sino el espacio donde se vive y de donde se proviene” 136. Entonces podemos decir
que para los Huilliches la tierra constituiría el derecho que tiene todo ser humano en
forma individual y colectiva, y el territorio sería para este pueblo, un espacio físico
donde se constituye la cultura y las prácticas culturales, las cuales están en estrecha
relación con la naturaleza y su conservación.

134
Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 17). Valdivia, Chile:
Imprenta Austral.
135
Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 19). Valdivia, Chile:
Imprenta Austral.
136
Bretón. (1999). Conflictos en el Territorio Mapuche. Interés, Derechos y Soluciones Políticas en
Juego. Temuco, Chile. Revista Liwen, núm. 5. P. 51

78
5.2.2. Su Cosmovisión.

A pesar de las múltiples arremetidas de los distintos sistemas impuestos en su


construcción social, lo que se ha podido mantener, de alguna manera, es su
cosmovisión. Y esto es, a partir de que no es necesario un espacio físico para poder
reproducirla, basta solamente que exista alguien del mismo pueblo que la cuente y otro
que la escuche, y se haga parte de lo que le está contando. Sin embargo, muy importante
es establecer que a pesar de que estos pueblos intentan mantener, aunque sea algunos
símbolos propios de su cultura, desde el inicio del siglo XX, “el cristianismo hace un
fuerte ingreso en la ideología mapuche, cambiando su estructura primordial en
relación con lo sagrado”137. Dentro de las divinidades Huilliches, existe un panteón de
divinidades de los cuales consistía entre personajes ancestrales, que se catalogan en
auténticos y místicos, los primeros (Kuifiche) se trazaban a través de la línea de
descendencia directa y que son propiciados en las ceremonias del guillatún, funerales
(awn) y durante oraciones familiares, y los segundos, los (Antupainko) se refieren a los
seres que provienen desde la creación y los rituales mantenidos por todos las líneas de
mapuche138. Es decir, los primeros son específicos de la comunidad, y los segundos son
establecidos dentro de toda la cultura mapuche, no dependiendo el lugar que se
encuentren territorialmente. Ahora bien, existían varios ritos dependiendo el hecho
social, siendo los más conocidos el funerario (awn), la construcción de una nueva ruca
(rukatum) o el machitún, el cual era la iniciación de una nueva machi. Volviendo con lo
que corresponde al sincretismo a partir del cristianismo, se puede observar que desde el
siglo XVIII ya se observaban variaciones en las creencias religiosas, no obstante, eran
consideradas en segundo orden. Se comenzó a concebir a unas divinidades bisexuales
llamadas Nguenechen, padre y madre de los hombres, y Nguenemapun, Señor y Señora
de la Tierra, expresándose, dependiendo de la situación, como divinidades benéficas o
maléficas139.

137
Greve, P. & S.. (1990). En Araucanía: Presente y Pasado (p. 81). Santiago de Chile: ed. Andrés
Bello.
138
Greve, P. & S.. (1990). En Araucanía: Presente y Pasado (p. 85). Santiago de Chile: ed. Andrés
Bello.
139
Greve, P. & S.. (1990). En Araucanía: Presente y Pasado (p. 87). Santiago de Chile: ed. Andrés
Bello.

79
Hoy en día se mantiene estas situaciones, sin embargo, cada día se van perdiendo más
a partir de las contradicciones que el gobierno regional ha implantado en la dirección de
la identidad de la cultura de los habitantes de la Región de Los Ríos, a propósito de la
continuación de la cristianización de estas comunidades, donde hoy en día, ya no es la
religión católica quien introduce sus creencias, sino que ahora son las iglesias
evangélicas que implantan sus dogmas y ayudan a estructurar, de alguna manera, su
orden social dominante hoy en día.

5.2.3. Estructura Familiar. Relaciones sociales y comunitarias.

Los Mapuches - Huilliches familiarmente tenían un carácter segmentario, ya que se


configuraban en numerosos grupos multifamiliares que organizaban en torno a unidades
residenciales. El núcleo inicial o grupo local era llamado pariente – muchulla, la cual
reorganizaba y administraba las diferentes labores productivas, generando, de cierta
manera, una autarquía, en relación con su subsistencia. Quienes estaban a cargo de esta
especie de institución simbólica, eran la mayoría de los descendientes directos al padre,
siendo los hombres quienes creaban una nueva ruca cuando se unían a una mujer, la
cual debía irse del ala de sus padres, y así se originaba el crecimiento de la comunidad.
Por otro lado, la unidad básica social de los Huilliches era el lof, y se desprende que
todos los miembros de un lof, son aquellos que provienen de un ancestro o antepasado
común, que por lo demás era mítico. En un segundo plano, los distintos lof se
organizaban a través de lo que se ha llamado rewe, siendo el jefe del rewe el Lonco,
líder político de la comunidad140. Por otro lado, se ha establecido la existencia del
aillarewe, el cual se constituye por nueve rewes, y tenía el carácter principalmente
militar, siendo el “Toqui” el líder de esta institución, no obstante, si no se presentaban
tiempos de conflicto el toqui perdía su autoridad. Por último, la mayor organización
política fue el butanmapu, que llegaba a reunir a la totalidad de los aillarewes para
enfrentar momentos de extrema urgencia, se ha establecido dos momentos principales
de butanmapu, primero con la introducción de los Incas y segundo, y está mucho más
fuerte, con la llegada de los españoles141.

140
Romieux. M.. (1968). Estructura Social y Propiedad (el caso Mapuche) (p. 68). Santiago de Chile:
Revista Chilena de Antropología, núm. 5. p. 68.
141
López Tapia, A.. Los Mapuches. Especial de Revista Acción Chilena.
Http://www.accionchielna.cl/pagina%20Central/los_ mapuches.htm. visitada: el 17 de junio de 2014.

80
Ahora bien, mucho más específico, dentro las uniones matrimoniales, se establecían a
partir de la poligamia, un hombre se casaba con una mujer, y posteriormente este
hombre se podía casar con las hermanas de esta mujer. La primera mujer con que el
hombre se casaba tenía cierta autoridad sobre sus hermanas. Generalmente, era la mujer
quien le pedía al hombre que se casase con su hermana porque así se le alivianaría la
carga del trabajo del hogar142. Dentro de las uniones matrimoniales, resalta la tradición
del rapto que se producía a partir de que el novio, con unos amigos, se iba a secuestrar a
la novia. Después de este acto, el novio se la llevaba a un lugar supuestamente para
violársela o hacerla suya a la fuerza, demostrando su poder dentro de la estructura
social sobre ella. Luego de esto, los padres de la novia, llegaban con la dote y se
oficializaba el matrimonio143. Siguiente a este suceso, la familia del novio construía la
ruca, entregaba semillas para los próximos los cultivos y algunos animales, y por
último, pero no menos importante, se le daba el privilegio a la novia por entrar a este
linaje (acto llamado mawun). La familia de la novia, ponía el ajuar doméstico y otros
animales. Estas situaciones daban lugar a trabajos mancomunados entre los nuevos
familiares, sin embargo, la nueva propiedad era exclusivamente para los novios144.

Dentro de la estructura familiar, los hijos que recibían más del padre eran considerados
dentro la sociedad como alguien con reconocimiento, por esta razón, se encontraba muy
fuerte la sujeción al padre, ya que si se le agradaba recibirían más bienes y posición
social que los otros integrantes de la familia, dejándose ver la estructura patriarcal por
excelencia145. Entre los trabajos productivos y económicos, al momento de la llegada de
los españoles, habían alcanzado ciertas técnicas agrícolas como ganaderas la que por la
demás estaban un poco más avanzadas que los que se encontraban al sur. No obstante,
seguían dependiendo de la recolección de frutos y otros hongos, como el piñón y el
changle, y la caza de animales, como son huemules, pudú, guanacos, entre otras
especies, complementándola con productos marinos.

Específicamente dentro de la agricultura, establecían un sistema sin rotación de


cultivos, ni abonos, por lo que los obligaba a estar trasladándose en diferentes lugares
142
Guevara, T.. (1908). Psicología del Pueblo Araucano (p. 38). Santiago de Chile: Imprenta Cervantes.
143
Treutlker, P.. (1958). Andanzas de un Alemán en Chile (1861 – 1963) (p. 160). Santiago de Chile:
Editorial del Pacifico.
144
Guevara, T.. (1908). Psicología del Pueblo Araucano (p. 369). Santiago de Chile: Imprenta
Cervantes.
145
Guevara, T.. (1908). Psicología del Pueblo Araucano (p. 34). Santiago de Chile: Imprenta Cervantes.

81
dentro de los territorios familiares, por lo que se generaba el apego de todo el territorio,
no de un solo lugar. Bajo esta lógica, la propiedad de la tierra no tenía importancia ya
que nadie tenía para siempre el mismo suelo para desarrollar su vida 146. Por otro lado,
dentro de la ganadería, su principal animal doméstico fueron los hueques, quienes
servían principalmente para tiempos que no se podía casar147.

Con la llegada de los españoles la mayoría de esta estructura económica cambió, se


estableció los cultivos de cereales y de ovejas traídas desde Europa. Para el siglo XIX y
con la llegada de los alemanes se terminó por introducir técnicas modificando para
siempre las antiguas prácticas de cultivos Huilliches, ya que genero cambios
sustanciales, sobre todo se creó la configuración simbólica de lo que es propiedad, esto
último a partir del manejo de los cultivos con abonos y recuperación de suelos,
destrozando lo que anteriormente se dijo, estructurando una nueva forma de relacionarse
entre ellos, es decir, cambiando al estructura social primordial.

5.2.4. El comienzo de las pérdidas de tierra Mapuche - Huilliche.

Así como en tiempos de los españoles, el Estado Chileno, comienza con el intento de
ocupar las tierras pertenecientes a los mapuches. En primera instancia, como vimos, en
el nacimiento del Estado - Nación de Chile, la llegada de los alemanes ejecutaron la
misión del Estado para apoderarse de las tierras originarias, llegando incluso, a generar
contradicciones en la misma legalidad, ya que la finalidad era hacer desaparecer al
Huilliche de las tierras. En un segundo momento, se crea, alrededor del año 1866, bajo
el gobierno de J.J. Pérez, la “Ley de Erradicación” “que dispone la fundación de
poblaciones en territorios indígenas y la asignaciones de tierras, y norma la
enajenación de propiedad de ellos, establece la erradicación de la población indígena
en terrenos no enajenables, declara la incorporación del territorio de la frontera o
Araucanía al estado nacional, las tierras como fiscales y abre los territorios, junto con
lo anterior, establece que para su enajenación los terrenos del estado serán subastados
públicamente, en lotes que no excederán las quinientas hectáreas. Asimismo, dispone

146
Romieux. M.. (1968). Estructura Social y Propiedad (el caso Mapuche) (p. 68). Santiago de Chile:
Revista Chilena de Antropología, núm. 5. p. 69.
147
Bengoa, J.. (1996). Historia del Pueblo Mapuche: siglo XIX y XX (p. 25). Santiago de Chile: ed. Sur.

82
que una parte de estos terrenos del Estado, se destinaran al establecimiento de colonias
de nacionales o extranjeras”148.

De esta manera, para el año 1870, se crea la estrategia militar de los “parlamentos”,
como maniobras de ocupación territorial, siendo el primero en Munquèn, en el cual se
reunieron los principales loncos de la zona con enviados chilenos, estos últimos con la
misión de averiguar los conflictos internos de los mapuches para usarlos en su contra,
así lo establece Bengoa “La resistencia mapuche al sur del Bio – Bio obligo a las
autoridades chilenas en el siglo XIX, al reconocimiento de los parlamentos, reuniones
entre caciques mapuches y representantes del Estado”149 . En un segundo parlamento se
presentó, y este se llamó el paramento de Tolten, conocido evento ya que el aventurero
francés Orelie Antonie de Tounens quería hacer un viaje por la Araucanía y la
Patagonia, generando así que el gobierno chileno se movilizara rápidamente
aprovechando el momento, para el conocimiento de aquellos territorios que el francés
quería reconocer. Finalmente la ocupación militar de estos territorios se efectuaron,
entre los años 1882 y principios de 1883, con la creación de las fortificaciones de
Villarrica, Pucón, Lonquimay y Alto Bio - Bio150.

Con la llegada del nuevo siglo nada cambió, en Valdivia para el año 1910 continuaban
autorizando las ventas de las tierras indígenas, apoderándose de la consigna de
civilización y progreso que contraerían las clases de elite de aquel entonces. Por otro
lado el mismo Estado establecía leyes para hacer que los Huilliches se fueran de las
tierras, así lo atestigua el ministro de colonización Federico Pugna Borde en 1908,
“aunque sea penoso decirlo hay que dejar constancia de la serie de abusos constituidos
por los mapuches en las provincias que aún no han sido radicados… hemos creado
leyes, sin embargo, están no han sido respetadas en ningún lugar, menos en Valdivia,
donde los indígenas (a la fuerza y por engaños) han dado más de 1000 escrituras para
vender sus tierras”151.
148
Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 121). Valdivia, Chile:
Imprenta Austral.
149
Bengoa, J.. (1996). Historia del Pueblo Mapuche: siglo XIX y XX (p. 167). Santiago de Chile: ed.
Sur.
150
Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 108). Valdivia, Chile:
Imprenta Austral.
151
Puga Borne, F.. (1908). Memoria de Ministerio de Colonización (p. 97 -98). Incluida en anexos a la
memoria del Ministro de relaciones exteriores. Santiago de Chile. Imprenta Nacional.

83
Por otro lado, una nueva estrategia, ahora legal, se efectuó, con los llamados “Títulos
de Merced”, los cuales fueron otorgados por la Comisión Radicadora de Indígenas a las
comunidades ubicadas en las actuales Regiones del Biobío, La Araucanía, Los Ríos y
Los Lagos entre 1884 y 1929, además de mapas, planos y sentencias judiciales. Estos
títulos de merced se establecían a partir del reparto gratuitamente de tierras para ubicar a
las familias Mapuches. Ahora bien, con esta manera se instituyo que los mapuches no
solo perdieran sus tierras primordiales, sino que además, sus nuevos establecimientos
estaban legalizados dentro de las políticas de Estado, generando, por un lado, la
inclusión de los Mapuches – Huilliches a la legalidad y por el otro, tenían la facultad de
vender las tierras, generando finalmente, el nacimiento de un trabajador incluido en el
sistema laboral de Chile, el cual, y bajo los procesos históricos, en muchos casos,
tuvieron que viajar a la ciudad convirtiéndose en peones de las clases dominantes.

84
5.3. El Patrimonio Cultural de la Región de Los Ríos y la contradicción social a la
hora de establecer una construcción de identidad para la región. (Comunidades
Manquelaf y Quilquilco).

Como se ha dispuesto, la idea de analizar estas dos comunidades, es establecer, por un


lado, el cómo estas colectividades antiguas fueron siendo sometidas dentro de los
procesos impuestos por el Imperialismo, el Capitalismo y los interés de la Clase
hegemónica de Chile, las que fueron interactuando de distintas maneras para ir forjando
el distinto de cada una de los grupos sociales. A pesar de esto se puede apreciar la
Resistencia Cultural, que tienen los integrantes de la Comunidad Indígena Quilquilco, y
es justamente donde se puede trabajar para que no tenga el final de que vivió
Manquelaf.

De esta manera hoy en día, muchas comunidades han seguido siendo sometidas para
que entreguen sus tierras, sobre todo a CONADI, quien sería el organismo encargado de
administrar las tierras consideradas mapuches. Sin embargo, las que ya han perdido su
carácter indígena, como Manquelaf, han vendido sus tierras a privados, tales como
Forestales y Piscicultura, que concentrarían la mayor de las antiguas tierras indígenas, y
personas naturales, las cuales compraron tierras, y por razones del tiempo y de la vida,
al morir, sus hijos heredarían la tierra, y dependiendo cuantos sean, se subdividiría
aquella tierra en pequeños predios. Por otro lado, ¿cómo se explica la perdida de la
identidad que antiguamente aquel territorio conservaba?, primero, porque la gente que
antiguamente formaba la comunidad comienza a tomar la decisión de irse a las ciudades
cercanas a trabajar porque ve más oportunidades económicas, resultado de la
hibridación cultural entre el Capitalismo y lo sagrado, la cual hace que los habitantes
conciban nuevas formas de desarrollo económico, por ejemplo, con la llegada de las
forestales en 1985 a los sectores estudiados, muchos mapuches comenzaron a trabajar
de leñadores, dejando de lado los trabajos comunitarios que finalmente generaba la
estructura económica de la comunidad.

Por otro lado, están las comunidades que no han perdido su carácter comunitario
indígena, primero, porque ellos mismos han tratado de mantener la comunidad, ya que
los abuelos y padres de las antiguas generaciones han perpetuado su cultura en las
enseñanzas colectivas dentro del mantenimiento de la comunidad, a pesar de todas los

85
ataques directos culturales provenientes desde el exterior para que se integre a la
ciudadanía civil de Chile. No obstante, es difícil definir si muchas de esas
colectividades son las ancestrales o no, sin embargo, lo importante es el intento de
mantenerse arraigado al espacio y a la antigua cultura mapuche, y no sucumbir a la
emigración y la pérdida de la totalidad de su cultura.

Teniendo claro esto, podemos decir que la “Comunidad Agro Manquelaf” responde a
esta primera situación anteriormente descrita, y la “Comunidad Mapuche Quilquilco”,
responde a este segundo caso. De esta manera, pasaremos a revisar cómo se formaron
cada comunidad y como hoy en día están estructuradas en su funcionalidad definiendo,
por qué la Comunidad Manquelaf pierde su carácter indígena y su carácter cultural
propiamente tal, para posteriormente revisar la construcción y lo que queda de cultura
en la comunidad Indígena Quilquilco, para así finalmente establecer que sería lo que se
puede considerar como su Patrimonio Cultural para enfrentar el resultado de Manquelaf,
y trascender en el tiempo.

5.3.1. Comunidad Rural Manquelaf.

Para comenzar, se comenzará con Manquelaf. Este sector se encuentra localizado,


específicamente en la intersección de los Ríos Remehue y Trafún. Para llegar a esta
localidad la principal forma es desde Folilco, localidad ubicada entre Los Lagos y el
Lago Riñihue.

Ahora bien y como se dijo, este sector antiguamente había sido una comunidad
mapuche. Singularmente, aún siguen viviendo los antiguos mapuches propietarios (por
Titulo de Merced) quienes en la actualidad, de la totalidad de 750 hectáreas que
antiguamente era el total del espacio de la comunidad, solamente se conservan 35
hectáreas. Son estas mismas personas quienes nos relatan, como se llamaba
antiguamente este lugar y como se fue transformando hasta nuestros días.

De esta forma, este sector se llamaba en un comienzo Manquihuilinay (cóndor que


vuela en la alturas), según María Ovando (mujer de 43 años, única heredera de las
ultimas tierras mapuches del sector, pero como persona natural, no como indígena), nos
dice que; “antes este lugar no se llamaba nadita Manquelaf, se llamaba
Manquihuilinay, por el apellido de mi ancestro que era el lonco. (M. Ovando,

86
comunicación personal, 17 de agosto de 2014). Posteriormente a esto, “mi abuelo fue
el último quien tuvo todo el campo entero, (obviamente el que ella conoce ya que
posiblemente se le había quitado muchas tierras a partir de la ley ya nombrada de 1866),
quien se llamaba Carlos Ovando. Cuando murió, como ya a nadie le importaba que las
tierras estuvieran siempre a manos de una sola persona, se dividió entre los hijos, los
cuales fueron cinco, entre ellos mi papa Oscar Ovando quien se quedó con 150
hectáreas…(M. Ovando, comunicación personal, 17 de agosto de 2014).

Por consiguiente, el Estado daba la facultad de traspasar las tierras indígenas a tierras
privadas si es que ya no se trataba de tierras comunitarias, por tal razón, con esta
división de tierra, comienza el fin de Manquelaf como comunidad Indígena, ya que se
destruía la antigua estructura social al romper con los sectores que antiguamente fueron
comunitarios.

La misma persona nos relata cómo su tía fue la primera en vender sus tierras.

Mi tía Irma Ovando, fue la primera en vender sus tierras, primero se las vendió a un
caballero llamado Hernesto Chicó, y las se las vendió al alemán quien le puso el
nombre de Fundo Santa Carlina, pero después vino Oscar Michaeli, el que tenía las
tiendas Micheali, y le volvió el nombre originario a Manquelaf, llamándose ahora
Fundo Manquelaf, quien vendió al final a CONADI y también a la piscicultura que esta
haya abajo … esas tierras que se le vendieron a CONADI fueron entregadas al que
llamamos el Lonco Freddy pero de lonco no tiene nada porque solo produce para él y
no tiene familia viviendo dentro de su fundo” (M. Ovando, comunicación personal, 17
de agosto de 2014).

Esta situación muestra como al momento en que las tierras no estaban en manos del
Pueblo Mapuche, se comenzó con una rápida desfragmentación del territorio, y por
ende, de la estructura cultural.

Establecido esto, importante decir es que la Familia Chicó se quedó con 30 hectáreas
las cuales fueron repartidas entre sus hijos, quienes aún siguen viviendo en el lugar. Uno
de los hijos que tiene tierra en este sector, llamado Juan Chico (Hombre de 84 años),
señala “yo no había sido siempre de este lugar, llegamos cuando tenía como 45 años,
antes vivíamos en Malihue… Nos vinimos pa´ ca, me acuerdo, porque las tierras
estaban baratas, eso siempre decía mi papá… y donde vivíamos nosotros no podíamos

87
vender ni comprar, porque eran tierras indígenas y CONADI no lo permitía, y nosotros
no nos importaba eso, ya que habíamos llegado de vivir de Osorno, y no teníamos
sangre mapuche” (J. Chico, comunicación personal, 21 de agosto de 2014).

De esta manera, se puede apreciar cómo a partir de la llegada de nuevos integrantes a


vivir a la zona, fueron deformando lo que quedaba de cultura, y aunque no se exprese de
esta manera, es así porque con la llegada de personas no indígenas al lugar terminaron
por desechar el pasado indígena, y esto se daría así, ya que es el mismo Estado quien va
instituyendo dentro de la sociedad la mentalidad de superioridad frente a los pueblos
indígenas, sobre todo en dictadura militar, donde se imponía la existencia de la
mantención y reproducción, de las clases dentro del orden social impuesto.

En lo que respecta a lo económico, esta comunidad está estructurada bajo la lógica


neoliberalista, a pesar de que muchos hermanos, a quienes les fueron entregadas las
tierras, a partir de los repartos, viven en especie de comunidades pequeñas, todos
trabajan para el bien personal, por ejemplo, ya no existen viveros o huertos
comunitarios, sino que cada uno dentro de su predio, si tiene la fuerza y los medio de
hacerlo, debe construirlo. Los principales trabajos a los que pueden optar sus habitantes
es en el Fundo Manquelaf, en las pisciculturas y en las forestales, no obstante, son
trabajos esporádicos, dependiendo de las fecha del año ya que hará variar la faena
productiva, por ejemplo en la piscicultura durante los meses de otoño se despide a la
mayoría de la gente, por lo que laboralmente son personas maltratadas ya que nunca
tendrán contratos indefinidos, y una estabilidad y tranquilidad laboral mostrando la
contradicción capitalista dentro de este territorio.

Culturalmente hablando, a pesar de que dentro de lo rural (como sucesor de la


estructuración social en torno al trabajo indígena anterior a los españoles), se mantengan
muchos objetos indígenas, no es el caso de las prácticas culturales.

Así se deja entre ver al escuchar a Orlando Chicó (Hombre de 77 años), hermano de
Juan, quien señala “aquí no existen las practicas mapuches… cuando era chico donde a
uno lo llevaban a vivir siempre estaban ellos, y ahí sí hacían cosas extrañas, como
rituales… me acuerdo que todos los años mataban animales cuando celebraban su año
nuevo… pero yo que desde que llegue aquí a Manquelaf nunca he visto nada de eso, ni
siquiera los Ovando que supuestamente eran los originarios de aquí…” (J. Chico,
comunicación personal, 21 de agosto de 2014).

88
De esta manera, se puede apreciar que desde hace mucho tiempo en el territorio de
Manquelaf las antiguas prácticas de la cultura Mapuche ya no existían, no obstante, esto
no es tan así, ya que según la señora Robertina Reñipan (92 años), Madre de María
Ovando recuerda que ella y sus familiares continuaron con las antiguas prácticas
culturales de sus antepasados, sin embargo, estos no eran exhibidos a los que no eran
mapuche porque no les interesaba que ellos supieran las cosas que hacían, “nosotros
nos íbamos caminado por el camino que está al otro lado del Trafún (rio), el cual hoy
ocupan los camiones. Por ahí subíamos, y caminábamos como 5 horas hasta llegar a
un Canelo gigante que debía tener como 500 años por lo grande de su tronco… y ahí
nos poníamos todos a jugar la chueca, a tocar los instrumentos, nos vestíamos como
nuestros ancestros… pero eso se fue perdiendo… los hijos de mis hermanas todos se
fueron de aquí cuando llegó la forestal y mis hijos, de cual solo queda la María,
terminaron yéndose a Valdivia a trabajar… y por eso se acabó lo que hacíamos”
(Robertina Reñipan, comunicación personal, 17 de agosto de 2014).

A pesar que entre los que llegaron a vivir a Manquelaf nunca vieron la continuación
de las prácticas culturales Mapuches, si siguieron aconteciendo, pero y como vimos (se
vio) anteriormente, los procesos de integración capitalista de los habitantes de la
comunidad a los trabajos productivos modernos, terminaron por desbaratar las ultimas
costumbres simbólicas y sagradas de los habitantes de Manquelaf.

89
5.3.2. Comunidad indígena Quilquilco.

5.3.2.1. La mantención de la comunidad y la resistencia de perder parte de su


cultura.

Para continuar, ahora se revisará a la Comunidad Indígena Quilquilco, la cual, a pesar


de estar inmersa de igual manera en el Capitalismo Neoliberal, resiste en dejar de ser
una Comunidad Indígena, propiamente tal, al establecer mecanismos que logren
resguardar su colectividad. Para entender esta situación, se han establecido tres
escenarios, el primero tiene que ver, con el mantenimiento del rechazo hacia lo exterior,
es decir, personas y empresas que han intervenido y se interponen, en el intento de
mantener la colectividad. Segundo, por la conciencia de que si pierden la colectividad
estarían destruyendo lo que sus ancestros intentaron mantener con gran deseo, y por
último, la aceptación de otros mapuches provenientes de otros lugares y/o comunidades
para la conservación de la cantidad de personas que vivan en colectividad, y por ende, el
intento de mantener la estructura cultural.

Inicialmente, esta comunidad está emplazada en las cercanías de la Localidad Las


Huellas, a 10 kilómetros por la ruta – 532, la misma anteriormente nombrada. Esta
Comunidad, de alguna manera, mantiene la misma estructura social, al presentarse aún
un Lonco como cabeza de la comunidad. El Lonco es el hijo de la Señora Inara Wenchu
(Mujer de 89 años) y sería la actual dueña de las tierras donde se encuentra la
comunidad emplaza en la actualidad, por lo que se desprende que desde su linaje han
sido los que han organizado la comunidad. Dentro de esta entidad, los hijos de la Señora
Inara Wenchu siguen viviendo en el lugar, a excepción de dos de los diez hijos que tuvo,
por lo que se puede apreciar el intento de continuar con la comunidad incluso desde sus
hijos, no fue el caso, como se vio, de Manquelaf. Por otro lado, Se puede observar que
dentro de esta comunidad se han integrado al mundo moderno al apreciarse en muchas
de las casas antenas de televisión digital, además de tener almacenes con cosas
necesarias de la ciudad, y que dentro de su estructura económica la mayoría de sus
integrantes trabajan afuera de la comunidad, sin embargo, conservan grandes huertos y
crianzas de animales para el uso doméstico y no comercial.

En lo que respecta a las formas, que fueron nombradas anteriormente, que darían la
explicación de la mantención de la comunidad, comenzaremos con el Mantenimiento

90
del Rechazo hacia el Exterior. Por un lado, en lo que respecta a la existencia de los
considerados “huincas” o gente blanca, que se han internado en la región desde la
llegada de los españoles, hoy en día, al parecer se ha mantenido un rechazo generalizado
por aquellos que social y culturalmente se han impuesto a estos otros sectores
oprimidos, así nos da cuenta la señora Inara: “No nos interesa los de afuera, a mí me
enseñaron que teníamos que solo había que preocuparse de nosotros, que la gente de
afuera… solo quería venir por nuestras tierras y echarnos de ella, por eso no nos
importa lo que suceda con la gente de otras partes” (Inara Wenchu, comunicación
personal, 03 de agosto de 2014). Otro claro ejemplo, lo hace saber la señora Antonia
Antilaf Wenchu (Mujer de 73 años), hija mayor de la Señora Inara, “un problema es
que siempre se pierden vacas, a mí me robaron 10 vacas el año pasado, y a los vecinos
también le robaron … me acuerdo que hace como tres años me robaron también 7
vacas … esos son los cuatreros, siempre han estado, pero no creo que sea la gente de
acá, porque nosotros no le robamos a los vecinos, no está en nuestra costumbre
hacerlo… son los de afuera los de las malas mañas, incluso pienso que son los del
fundo de allá arriba por que estas tierras colindan con un fundo de un gringo, y él
siempre nos ha tratado de comprar las tierras porque estamos al lado del rio pero
nosotros no queremos, ni menos a ese gringo envidioso” (Antonia Antilaf Wenchu,
comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

Así, inicialmente, el resentimiento que se ha generado en torno a los “de afuera”,


también se ha producido en contra de las empresas forestales y piscicultura del sector,
ya que han intervenido negativamente en las relaciones sociales y culturales dentro de la
comunidad, así nos comenta la señora Antonia: “antes nosotros nos íbamos a bañar
siempre al rio, con la piscicultura ya no podemos, porque si dejamos pasar una noche,
uuf ni le cuento, todos picaos al otro día … y pues claro que afectó, el rio es como parte
mismo de nosotros, es como si fuera nuestro manantial de leche, pero estos desgraciaos
sin importar la vida de nuestros hijos hacen lo que quieren” (Antonia Antilaf Wenchu,
comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

Se puede apreciar, cómo la intervención capitalista de las empresas nombradas, ha


generado que esta comunidad haya generado un tipo de conciencia en contra de quienes
han intervenido su espacio vital y han procurado el progreso económico, sin importar el
daño provocado daños a la salud misma del cuerpo, y sobre todo, a la vida cotidiana de
las personas que habitan en la colectividad.

91
En segundo plano, se encuentra la conciencia que se ha concebido a parir de la
creación de la necesidad de “No perder la Lucha de los Ancestros”, la cual, es contada
por otra hija de la señora Inara, llamada Ramona Antilaf Wenchu (mujer de 67 años)
quien cuenta que, “ha sido difícil mantenerse en las tierras estas… muchas personas
venían y nos decían que nos fuéramos de estas tierras y que nos pagaban mucha plata,
pero mis abuelos y mis padres saben el valor real de estar acá, de hecho dejaron que
otra gente mapuche que no tenía tierras llegaran y se instalaran para que los que no
eran mapuches no vinieran y no las quitaran”. Nos continua diciendo esta mujer,
“nosotros, las hijas y mis hermanos… saben que debemos luchar por nuestra
comunidad, y siempre le decimos eso a nuestros hijos y nietos… es más, nosotros, los
más viejos, les ayudamos a que se queden acá, juntándole plata pa´ que puedan
construirse su casa y se queden ayudando en los trabajos de acá” (Ramona Antilaf
Wenchu, comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

Como se ha visto, dentro del imaginario colectivo de la comunidad se entiende la


mantención de la comunidad por que se ha provocado que exista la necesidad de sus
integrantes de luchar por ella, ya que tras generación en generación configurando una
memoria colectiva bajo esta situación.

Por último, encontramos la Aceptación de Otros Mapuches provenientes de otros


lugares y/o comunidades, estrategia para la conservación, contención y el no
vaciamiento de la cantidad de personas que vivan en colectividad, intentando mantener
la estructura social y cultura de alguna manera. La señora Inara nos relata de esto
último, “este lugar se fue haciendo conocido, por que llegaban de otros lados a pescar,
y así ellos fueron pidiendo pedacitos de tierra, primero a los abuelos de mis abuelos y
luego a mis abuelos, quienes se llamaban Lauriana Lun y Juan Manuel Wenchu y luego
a mi padre Ramón Wenchu y yo y así… Yo he aceptado por el simple hecho de que así
había más gente con quien compartir y tirar para arriba la comunidad, por eso creo
que mis abuelos hicieron lo mismo” (Inara Wenchu, comunicación personal, 03 de
agosto de 2014).

De esta manera, comenzaron a llevar a personas mapuches para habitar tierras


desocupadas para así hacer valer la existencia de la comunidad. No obstante, de igual
manera fueron robadas tierras por parte de la presión privada al Estado y por el mismo
Estado, quien, como vimos administra las tierras mapuches. La señora Ramona se

92
refiere a esto última, al decirnos la cantidad de tierra que poseían, y cuantas están en
manos de la comunidad actualmente. “de una cantidad de casi 680 hectáreas, hoy solo
quedan 120 hectáreas, todas las otras fueron arrebatadas por CONADI y posterior se
vendieron a la forestales y se construyeron también esos fundos de allá arriba”
(Ramona Antilaf Wenchu., comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

De esta forma, se ha logrado mantener a la comunidad, no obstante, y a partir de las


arremetidas directas de la modernidad, el Capitalismo y la Globalización, se establece la
pérdida total de la tradición de los mapuches de la Comunidad Quilquilco.

5.3.2.2. Causas que pueden provocar la desaparición de la comunidad.

Así como existen estos tipos de resistencia que han generado el mantenimiento de la
comunidad, también existen causas directas que podrían provocar su desaparición como
se vio en la comunidad Manquelaf.

La primera, tiene que ver con la transformación de la cotidianidad. Se quiso mostrar


en un momento, la forma antigua de estructuración social y cultural del Pueblo Indígena
Huilliche, y se estableció de tal modo, para poder entender la brecha cultural que existe
desde un momento histórico a otro, como lo sería la organización social anterior a los
españoles con la que hoy viven sumergidos en el mundo modernizado. La señora Inara
resalta como ha ido cambiando la cotidianidad de la vida en la comunidad y lo que
habría llevado a la transformación cultural, señala; “antes todo era de la tierra, todos
los años nos preparábamos dependiendo de lo que se tenía que hacer para la fecha, la
misma carne… Todos los años matábamos a novillos de tres años para tener carne todo
el año, ahora, casi ni se come carne de animal de nosotros, no hay tiempo de criarlos,
de matarlos y después de guardarlos, pero siempre uno tiene uno que otro para alguna
celebración… lo mismo pasa con los pollos antes eran todos criados, ahora vienen en
esas bolsas y le meten que cosa quien sabe” (Inara Wenchu, comunicación personal, 03
de agosto de 2014).

La señora Ramona, también señala algo sobre esto último.

“Yo me acuerdo que antes todos los días teníamos que ir al rio buscar agua. En las
mañana era lo mejor porque nos encontrábamos con nuestros primos y muchas veces
nos quedábamos pescando, jugando y otras cosas al lado del rio, pero nuestro hijos ni
van prefieren quedarse viendo tele, a parte ya casi todas las casas tienen cañería por lo

93
que ni hay que ir al rio” (Ramona Antilaf Wenchu., comunicación personal, 03 de
agosto de 2014).

Por consiguiente, un nuevo problema se ha manifestado y tiene que ver con uno de las
tres formas de resistencia que genera como comunidad, comprendiendo el hecho de
dejar que lleguen Mapuches de afuera a la comunidad. Algunos de ellos anteriormente
de vivir en esta comunidad no vivían en comunidades propiamente tal, sino que lo
hacían en ciudades tales como; Osorno, Puerto Montt, La Unión, Rio Bueno, etc., de tal
manera, trajeron consigo la cultura de la ciudad la cual se estructura distintamente que a
la del campo, al presentarse, en mayor medida el consumismo como manifestación
social en su máxima expresión. Por otro lado, las nuevas generaciones también han
participado de internar prácticas culturales y objetos externos a la comunidad,
transformando las relaciones sociales. Además, muchos de los jóvenes de hoy en día,
trabajan en la ciudad de los lagos, trayendo consigo la forma de relación social que se
expresa vivir en una sociedad Neoliberalista. La señora Inara nos comenta de esto:
“lamentablemente la gente que ha llegado gracias a mis hijos, ha echado a perder la
comunidad, porque llegan con vicios de afuera y no reconocen su costumbres, de hecho
somos tres las personas que aun sabemos hablar mapuche… ni mi hijas saben” (Inara
Wenchu, comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

Por otro lado, un último caso se nos presenta dentro de la desaparición de la cultura de
esta comunidad. De manera tal, en lo que respecta con la mantención de su cultura,
podemos decir que existe una atmosfera de añoro por quienes son los más antiguos en la
comunidad, Antonia Antilaf Wenchu, resalta que dentro de la comunidad, ya partir de
nuevas formas de expresarse en el mundo han perdido muchas prácticas culturales que
los hacía estar en el mundo, incluso cosas tan básicas como su dialecto, “incluso se ha
tratado de traer a profesores que hablen mapudungun pero ha sido difícil enseñarles a
nuestros hijos porque no quieren aprender… se sienten menos con otras personas por
ser mapuches, por eso creo que reniegan de su pasado” (Antonia Antilaf Wenchu,
comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

En lo que respecta a las vestimentas antiguas y habituales que ocupaban los Huilliches
y que conforma una característica especifica de la construcción cultural, se puede decir
que hoy en día, la búsqueda de marcas reconocidas no ha estado expenso a esta
situación, desgarrando la mayoría de las prácticas sociales y culturales que giraba en

94
torno a la confección de sus ropajes. Así lo testimonia la Señora Inara: “sus abuelas y
sus amigas fueron las ultimas en usar las faldas y pañelones largos. Mi abuelita
Lauriana y mi abuelita Nieve siempre lo usaban y nos decían que debíamos hacerlo
también… después ya nadie se puso ni una cuestión… a veces nosotras nos ponían esas
vestimentas cuando habían festividades, pero fue la generación de mis hijos lo que ya
no se pusieron nada más” (Inara Wenchu, comunicación personal, 03 de agosto de
2014).

Bajo esta misma lógica la señora Ramona nos cuenta que “antes mi mama tejía al
lado del fogón con sus palitos de Colihue, eran como de 40 a 50 cm… servían pa´
hacer faldas, ponchos, frazadas, pantalones, gorros, y otras cosas más” (Ramona
Antilaf Wenchu, comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

De esta manera, se muestra como estas situaciones han transformado la forma de la


forma de relacionarse los habitantes de la comunidad se relacionan con el medio
ambiente, y las mismas personas.

95
5.3.2.3. El Patrimonio Cultural y la oportunidad de la mantención y proyección
cultural de comunidades y colectividades. Comunidad Indígena Quilquilco.

"Estamos conscientes de nuestra realidad y nuestra cultura, a pesar de que nuestros


hijos no estén tan interesados... estamos tranquilos porque sabemos que se sienten
orgullosos de ser Mapuches o por lo menos así lo muestran… por lo que la esperanza
de que se mantenga la comunidad aun esta”. (Inara Wenchu, omunicación personal, 03
de agosto de 2014). De esta manera la señora Inara señala cómo es el sentimiento al
entender cuál es la manera de proyectar la comunidad hacia el futuro.

Como hemos revisado, prácticamente la estructura social y cultural casi han


desaparecido ya que cada día se acercan más a la integración estatal, a propósito del
proceso de hibridación que termina por generar el fin de la antigua sociabilización. No
obstante, el intento de recuperar ciertas tradiciones por parte de esta comunidad, genera
esperanza a la hora de proyectar lo que es y fue sagrado por los Mapuches Huilliches,
en este caso. Bajo esta lógica, la señora Ramona nos cuenta que: “los últimos años
hemos celebrado el año nuevo Mapuche, y han venido muchas personas de otras
comunidades incluso... es bueno porque están todas las edades jugando... generalmente
a la pelota y a la rayuela, pero también jugamos a la chueca pero nunca tanto"
(Ramona Antilaf Wenchu, comunicación personal, 03 de agosto de 2014). Esto último
deja entre ver que existen intentos por la recuperación de su cultura, sin embargo, al
estar tan deteriorada su antigua estructura social ha resultado que las luchas y
tradiciones Mapuches de otros lados se haya establecido dentro del imaginario de todos
los Mapuches haciéndose parte de su construcción como comunidad bajo estas lógicas,
no obstante, direccionar a las comunidades Huilliches a reconocer su historia, y las
cosas que los diferenciaba de los otros pueblos mapuches es también comenzar con la
recuperación de la memoria el cual busca proyectar hacia un futuro a la comunidad.

Ahora bien, en lo que respecta a rasgos que hayan podido quedar de la construcción de
la estructura social, podemos decir que a pesar de que haya un Lonco, este último ya no
tiene el carácter que antiguamente tenia, hoy más bien, se ha convertido en un
intermediador entre la comunidad y las instituciones estatales, a pesar de que sea el
quien administre los trabajos productivos que se forman dentro de la comunidad. La

96
señora Inara nos comenta que, “la idea de conservar un Lonco es por que como la
comunidad están grande necesitamos un representante, mi hermano, tiene que ir a la
municipalidad de repente a hacer tramites o a buscar cosas que nos dan en INDAP,
pero así que mande como lo hacían mis abuelos por ejemplo” (Inara Wenchu,
comunicación personal, 03 de agosto de 2014).

De manera que para lograr el reconocimiento de su pasado histórico y basarlo en la


proyección del mantenimiento de su cultura debe generarse ciertos pasos a seguir, el
primero es que las comunidades o colectividades sociabilizadas reconozcan su pasado,
su memoria e identidad, de manera que puedan ir reconociendo símbolos culturales
como propios y así proyectar la comunidad intentando detener la desaparición.
Segundo, el reconocimiento de aspectos, símbolos y prácticas culturales como algo
sagrado para la comunidad, ya que les daría el lugar en el mundo logrando proyectarlos
hacia futuro, daría la oportunidad de detener el proceso de olvido de su cultura. Tercero,
reconocer al Patrimonio Cultural desde Abajo, como se ha planteado, como la manera
de poder proyectar su cultura y mantenerla en el tiempo, lograría que, por un lado, se
detenga el proceso de olvido cultural, y por el otro, que las próximas generaciones
logren hacerse parte de la historia de sus ancestros reconociéndose a si mismo parte de
la colectividad y reproducirla para intentar, aceptando que jamás será igual, la
recuperación de la estructura social y cultural de los antiguos mapuches del territorio.

97
Conclusión

A partir de lo que se ha revisado, hasta alturas, se puede afirmar que, por un lado, se
acepta que en esta sociedad y en la diversidad de organismos sociales que forman parte
de ella, que la cultura sea perpetuada, dirigida, encausada y coaccionada en torno al
poder que ejerce la clase dominante, quien la ha utilizado para con ella concretar y
aglutinar las distintas capas sociales bajo un proyecto histórico comandado por los
propios intereses de clase. Por consiguiente, la construcción del Patrimonio Cultural
desde Arriba se presenta como una imposición de control social. Por otro lado, se
sostiene que la construcción del Patrimonio desde Abajo, no puede ser construida a
partir de las lógicas de control que se han presentado dentro de cada momento y proceso
histórico, al ser de esta forma, se reproduce la imposición cultural y por ende el control
de la construcción de la identidad y de la memoria las que son en finalidad quienes
terminan por dar el carácter específico de cada colectividad. A través del análisis que
arrojó esta investigación, se evidenció que primero las clases de elite de la sociedad
chilena utilizaron este concepto para arraigar a las personas que se encuentran dentro
del espacio donde se desarrollaría el Estado – Nación, tal es el caso mencionado con el
Palacio Cousiño, el cual al ser un patrimonio dirijo por el estado, en este caso un
municipio, el discurso que se ofrece en un tour se encuentra totalmente dirigido en pro
de la vida ostentosa y las modas parisinas del siglo XIX, sin embargo este discurso
debería ofrecer al público el hacerse parte desde su construcción más allá del inmueble
sino más bien comprendiendo el origen de su fortuna, el cual se debe al esfuerzo de la
vida minera. O sea el patrimonio desde abajo. De segundo, y manteniendo el proceso
anterior, se pusieron en manos de las empresas privadas quienes comenzaron a
comercializar, otros objetos, además de considerarlos valiosos sólo por el hecho de
provenir de Europa, sino que también, memorias, imaginarios colectivos, identidades
locales, pasaron hacer parte de la gran oferta capitalista, situación que se sigue viviendo
hoy en día a partir del avance de la empresa turística, como expresión Neo-Liberalista.

Hoy en día, el Capitalismo, la Globalización, los interés de clase que conducen el


Estado en Chile, la imposición imperialista económica, terminan siendo finalmente los
entes que dirigen el proyecto histórico de la sociedad, así como también lo hace el

98
sistema educativo a través de su poder hegemónico, siendo esta otra arista involucrada
en la construcción y manipulación de la memoria. Dentro de lo que respecta la
imposición de la identidad, como se vio con las comunidades estudiadas, las
comunidades indígenas Huilliches ya han perdido la totalidad de la estructura social que
provenía desde sus antepasados, y lo poco que queda se proyecta en lo ritual y que
mantendría, de cierta manera, los lazos sujetos a la construcción y preservación de la
colectividad, como es el caso de Quilquilco. No obstante, la debilidad de la estructura
cultural sumado al olvido colectivo de un pasado y la imposición por uno creado e
inventado para el control social, fundado desde la Gobernación Regional de Los Ríos, y
que provocaría que se perdiera para siempre una parte cultural de la civilización
humana, tal y como aconteció con la Comunidad Rural Manquelaf, donde ya no existe
ninguna estructura social Mapuche – Huilliche ni menos rastros culturales específicos
las antiguas tradiciones, solo algunos pequeños concejos recibidos por algún Huilliche
que se fueron llevando a la práctica y que a larga se fueron integrando a lo rural, ya que
se afianzaba dentro de lo que respecta a la vida del campo, generando olvido y muchas
veces sintiendo vergüenza o cierto rechazo desde donde provenían realmente.

En definitiva, proyectar la construcción del Patrimonio Cultural desde Abajo


entendiéndola como la capacidad de originar una posibilidad en contra el olvido
memorial y generacional de un pasado que caracteriza a una colectividad donde la
verdadera misión del cientista social, y en este caso, del Historiador, es primero que
todo reivindicarla y proyectarla hacia un futuro donde se entienda que la función
intelectual y académica debe ser la búsqueda de guiar y hablar, en algunos casos, por
los que no tienen voz, es decir, por los que han y están siendo acallados por las
imposiciones culturales de la clase dominante,( ejemplo de esto, las pisciculturas que
dejan sin trabajo en ciertas épocas del año) para establecer que los únicos que pueden
activar un Patrimonio Cultural son quienes han participado de la construcción, primero;
de la Practica cultural, que generaría objetos específicos a esa práctica (Patrimonio
Tangible) y que además, generaría memoria en torno al objeto ocupado en dicha
práctica cultural (Patrimonio Intangible).

En resumen, la importancia de generar y resaltar los mecanismos de control que son


utilizados por el poder dentro de lo que se ha impuesto como patrimonio, tiene
importancia a la hora de decir que incluso los trabajos que han sido críticos a la forma
con que el Estado lleva la conducción de lo que no proyectaría en el mundo hacia

99
futuro, se han tornado confusos cuando se establece que muchos de los lugares
patrimonializados por el Estado provenientes de los sectores subalternos, son aquellos
que no molestan en su búsqueda por establecer su proyecto histórico, sobre todo si
vienen desde los proceso capitalistas, los cuales son enaltecidos y altamente valorizados
por la sociedad chilena la cual aún no está dispuesta a entender que el mundo se mueve
de diversas formas, y que como siempre una vez se muestra el patrimonio como un ente
para hacer a la comunidad hacerse parte de una identidad ilusa y distinta a la que
realmente es, por lo demás, reafirman su poder sobre lo que se ha considerado como
sagrado por la sociedad, reconociendo que lo que se ha considerado sagrado en tal
momento necesariamente no nos representa hacia las nuevas generaciones.

Desde esta arista se esclarece la importancia de establecer los estudios del Patrimonio
Cultural desde la postura ya dada, puede hacer que la lucha de mantener viva la voz de
los sectores que no participan de la construcción del proyecto histórico, puedan
mantenerse en las arremetidas de la modernidad, la Globalización y el Sistema
Económico Neo-Liberal, el cual, como hemos revisado, y a partir del concepto de
hibridez, va generando que valla acabándose de apoco lo que los unía dando por
finalizada la pacificación de los pueblos indígenas Huilliches, al integrarlos
completamente al aparto Estatal.

Por consiguiente, en lo que respecta como aporte al estudio de este concepto, este
trabajo busca expresar la historia crítica dentro de trabajos culturales a través de
concepciones teóricas que no se han planteado o establecido desde los trabajos
historiográficos en torno al Patrimonio, ya que han dejado de lado varios aspectos, y
Esta investigación, primeramente intenta volver a posicionar el tema para futuras
discusiones y nuevos planteamientos. Por otro lado y como aporte a la disciplina
histórica, este trabajo busco establecer la alianza que debe tener la historia con otras
disciplinas complementarias, de tal manera, ir apaliando al discusión de esta disciplina
investigativa a otras áreas donde le cuesta ingresar.

Finalmente, esta nueva forma de concebir el Patrimonio Cultural desde Abajo debe
preocuparse de buscar la trascendencia de lo que los hace, los une y los mantiene en el
mundo, reconociendo eso sí, la presencia de otros tipos de patrimonios, dependiendo de
la diversidad cultural existente en el mundo. Para lograr esta misión, es necesario que
sean las mismas colectividades o comunidades las que activen y resguarden lo que ellos

100
consideran Patrimonio Cultural como forma contra hegemónica dentro de la imposición
dominadora del poder y de la mantención del proyecto histórico de la clase dominante.
De esta forma, la real misión que tienen los Cientistas Sociales, es de guiar, desde esta
postura, a las comunidades que están perdiendo completamente su pasado (hablar por
los silenciados).

101
Bibliografía

- Alegría Luis. (2012). Patrimonio, Museos y Museología. En Hecho en Chile,


Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural Santiago de Chile: Ediciones del
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
- Althusser, L.. (1967). La Revolución Teórica de Marx (p. 136). México: Siglo
XXI.
- Amín, S. (2001). Imperialismo y Globalización (p. 63).
http://www.rcci.net/globalización/ 2001/fg175.htm.
- Andrade B.. & Mariano M.. (2009). Poder, Patrimonio y Democracia
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=62815957002> ISSN 1870-0063.
- Arévalo J. M.. (2004). La Tradición, el Patrimonio y la Identidad. Estudios
Extremeños, 60, 926.
- Bartolomé, M. (1997). Gente de Costumbre y Gente de Razón: las Identidades
Étnicas en México (p. 84). México D.F.: ed. Siglo XXI.
- Bauman, Z. (1999). La Globalización: Consecuencias Humanas. España. Fondo
de Cultura Económica.
- Benedict, A.. (2006). Comunidades Imaginada. Reflexión sobre el origen y
difusión del Nacionalismo. México D.F.: Fondo de Cultura Económica.
- Bengoa, J.. (1996). Historia del Pueblo Mapuche: siglo XIX y XX (p. 38).
Santiago de Chile: ed. Sur

- Berger, p. & Luckman, T. (1983). La Construcción Social de la Identidad.


México D.F: Amorrortu Editores.

- Bilberty, N.. (1999). Democracia para la Diversidad (p. 119). Barcelona,


España: ed. Ariel S.A.
- Blancpain, J.. (1985). Los Alemanes en Chile (1816-1945) (P. 73) .Santiago de
Chile: ed. Hachette.
- Bolzman, C.. (1996). El concepto de identidad. Reflexiones Teóricas a partir del
estudio del problema del Exilio, En Identidad: Análisis y Teoría, Simbolismo,
Sociedades complejas, Nacionalismo y Etnicidad (p. 159). III Coloquio Paul Kirchhoff.
Universidad Nacional Autónoma de México. México D.F.

- Bourdieu, P. (1990). Sociología y Cultura México D.F.: ed. Grijalbo.

- Bourdieu, P. & Passeron, J. (1995). La Reproducción, Elementos para una


Teoría del Sistema de Enseñanza (p. 44). México. D.F.: ed. Fontamara.
- Bourdieu, P. (1996). Sobre La Televisión (p. 20). España: ed. Angrama.
- Bourdieu, P. (2001). Capital Cultural, Escuela y Espacio Social. México D.F.:
ed. Siglo XXI.
- Bretón. (1999). Conflictos en el Territorio Mapuche. Interés, Derechos y
Soluciones Políticas en Juego. Temuco, Chile. Revista Liwen, núm. 5. P. 51

102
- Canalé, A.. & Morel, H.. (2005). Actores y Representaciones en la
Patrimonialización de las Agrupaciones del Carnaval Porteño (p- 15). Cuadernos de
Antropología Social Nº 21. Publicación de la Sección de Antropología Social, Instituto
de Ciencias Antropológicas, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad de Buenos
Aires.

- Canclini García N.. (1989). Culturas híbridas. Estrategias para entrar y salir de
la Modernidad. Grijalbo, México: ed. Paidos.

- Canclini García, N.. (1993). El Consumo cultural en México (p. 56). Canaculta,
México: Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Dirección General de
Publicaciones.

- Canclini García, N.. (1997). Culturas Hibridas y Estrategias Comunicacionales.


En Estudios sobre las Culturas Contemporáneas. Época II. III. P. 111.
- Canclini García, N.. (1999). Los usos sociales del Patrimonio Cultural. En
Cuadernos Patrimonio Etnológico. Nuevas perspectivas de estudio (p. 18). España.
Consejería de Cultura, Junta de Andalucía.
- De Lucas, F. (2004). Globalización e Identidades. Claves Políticas y Jurídicas
(p. 22). Barcelona, España: ed. Icaria.
- De Varine, H. (1976). La Cultura de los Autores (p. 33). Paris, Francia: ed. du
Seuil. Harnecker, M.. (1994). Los Conceptos Elementales del Materialismo Histórico.
(p. 26). México: Siglo XXI.

- Del Mármol Cartaña, C.. (2007). Pasados locales, Políticas Globales: Los
Procesos de Patrimonialización en un Valle del Pirneo Catalán (p. 45). (Tesis
Doctoral). Programa de Doctorado en Antropología Social y Cultural. Universidad de
Barcelona. Barcelona, España.
- Eliade, M.. (1998). Lo Sagrado y Lo Profano. Barcelona, España: ed. Paidós.
- Equipo Técnico del Gobierno Regional de Los Ríos. (2009). Estriega Regional
de Desarrollo de la Región de Los Ríos 2009 – 2019. Valdivia, Chile. Trama
Impresores S.A.
- Espiñeira G.. & Keina R. (escritos). (2009). El Centro y la Periferia. Una
reconceptualización desde el pensamiento Descolonial Panel V (p. 2). En Colonialidad
del poder: Capitalismo, Democracia y Sociedad. III Training Seminario de Jóvenes
Investigadores en Dinámicas Interculturales. Fundación CIDOB. Congreso llevado a
cabo en Barcelona, España.
- Florescano, E. (1993). El Patrimonio Cultural de México (p. 9). México D.F.:
Consejo Nacional para la Cultura y Arte. Fondo de Cultura Económica.
- Gainza, Á.. (2006). La entrevista en Profundidad Individual. En Metodologías
de Investigación Social. Santiago de Chile: Lom Ediciones.
- Gellner, E.. (1997). Naciones y Nacionalismo (p. 20). España: Alianza Editorial.
- Giménez, G.. (1996), La Identidad Social o el Retorno del sujeto en Sociología.
En Identidad: Análisis y Teoría, Simbolismo, Sociedades complejas, Nacionalismo y

103
Etnicidad (p. 17). III Coloquio Paul Kirchhoff. Universidad Nacional Autónoma de
México. Mexico D.F.
- Gissi, J, Larraín J. & Sepúlveda F. (1995). Cultura e Identidad en América
Latina (p. 13). Santiago de Chile. Institución Chileno de Estudios Humanísticos,
ICHEH.
- Greve, P. & S.. (1990). En Araucanía: Presente y Pasado (p. 81). Santiago de
Chile: ed. Andrés Bello.
- Grez, S.. (2012). Breves reflexiones sobre Patrimonio Histórico: a propósito de
Chile, el Estado Nación y el Pueblo Mapuche. En Hecho en Chile. Reflexiones en torno
al Patrimonio Cultural (p. 78). Santiago de Chile: Ediciones del Consejo Nacional de
la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
- Guevara, T.. (1908). Psicología del Pueblo Araucano (p. 38). Santiago de Chile:
Imprenta Cervantes.
- Godoy Orellana M.. (2007). ¡Cuándo el siglo se sacará la máscara!. Fiesta,
carnaval y disciplinamiento cultural en el Norte Chico. Copiapó, 1840-1900. Santiago
de Chile: HISTORIA núm. 40, I. 8.
- Haberbam, J. (1985). El Discurso Filosófico de la Modernidad (p. 144). Madrid,
España: ed. Taurus.
- Halbwachs, M.. (2004). Memoria Colectiva. España: Prensas Universitarias de
Zaragoza, Nueva Edición.
- Halpert, M.. (2007). Introducción. En Habitar el Patrimonio. Santiago de Chile:
Ediciones Universidad Central.
- Harnecker, M.. (1994). Los Conceptos Elementales del Materialismo Histórico.
(p. 17). México: Siglo XXI.
- Harvey, D. El Capitalismo: La Fábrica de la Fragmentación (p. 23). Revista
Vuelva núm. 190. http://www.letraslibres.com/sites/default/files/pdfs_articulos/Vuelta-
Vol16_190_07CptFbFrgDHly.pdf
- Hobsbawn, E.. (1998). La Era del Capital 1848 – 1875. España: ed. Crítica.
- Iñiguez, L.. (2001). Identidad: De lo Personal a lo Social, un Recorrido
Conceptual. En La Constitución Social de la Subjetividad (p. 209). Madrid. España: ed.
Catarata

- Hobsbawm, Eric & Ranger, Terence. (2002). La Invención de la Tradición.


Barcelona, España: ed. Crítica,
- Jelin, E.. (2002). Los Trabajos por la Memoria (p. 39). Madrid, España: ed.
Siglo XXI.
- Krebs Kaulen, A.., Tapia Guerrero, Ú.. & Schmidt Anwadter, P.. (2001). Los
Alemanes y la Comunidad Chileno - Alemana en la Historia de Chile. Santiago de
Chile: Liga Chileno-Alemana.
- Ley chilena Nº 17.288.
- López Tapia, A.. Los Mapuches. Especial de Revista Acción Chilena.
Http://www.accionchielna.cl/pagina%20Central/los_ mapuches.htm. visitada: el 17 de
junio de 2014.
- Maillard, C. (2012). Construcción Social del Patrimonio. En Hecho en Chile (p.
19). Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural. Santiago de Chile: Ediciones del
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
104
- Marsal, D.. (2012). Aproximaciones Críticas al Poder y al Patrimonio. En
Hecho en Chile. Reflexiones en torno al Patrimonio Cultural Santiago de Chile:
Ediciones del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Andros Impresores.
- Marx, K.. (1989). Contribución Critica a la Economía Política (p. 7). Santiago
de Chile: ed. Progreso.
- McGee, S.. (2000). Las Derechas. Las Extremas Derechas en Argentina, Brasil
y Chile (p. 32). Argentina: ed. Argentina.
- Melucci, A.. (1985). El Desafío Simbólico de los Movimientos Contemporáneos.
Revista de Investigación Social núm. 4. 52, pp. 789 - 816.
- Millanguir, D.. (2008). Panguipulli: Historia y Territorio (1850 – 1946) (p. 16).
Valdivia, Chile: Imprenta Austral.
- Moreno, T.. (2010). Hacia una Nueva Metodología de Trabajo. Santiago de
Chile. Museos núm. 29. P. 11.
- Perez Rosales, V.. (1935). La Colonización de Valdivia y Llanquihue (P. 41).
Valparaíso. Chile: Soc. Imp. y Lit. Universo.
- Pizzorno, A.. (1986). En la Racionalidad de la Elección Democrática, En El
Individualismo: Teorías y Métodos. París, Francia: ed. FNSP.
- Prats, LL.. (1997). Antropología y Patrimonio. Barcelona, España: ed. Ariel
S.A..

- Puga Borne, F.. (1908). Memoria de Ministerio de Colonización (p. 97 -98).


Incluida en anexos a la memoria del Ministro de relaciones exteriores. Santiago de
Chile. Imprenta Nacional.
- Rabi, Salim. (2007). Habitar ¿Cuál patrimonio?. En Habitar el Patrimonio (p.
142). Santiago de Chile: ed. Universidad Central
- Renan, Ernest. (1882). ¿Qué es una Nación?.
- http://enp4.unam.mx/amc/libro_munioz_cota/libro/cap4/lec01_renanqueesunana
cion.pdf
- Romieux. M.. (1968). Estructura Social y Propiedad (el caso Mapuche) (p. 68).
Santiago de Chile: Revista Chilena de Antropología, núm. 5. p. 68.

- Schwerter L. & Basso Zapata, I.. (2010). Reconstrucción de la Memoria


Histórica del Barrio La Aguada (1906 – 2010). Unidad de Comunicaciones Consejo de
Cultura y de La Artes, Región de Los Ríos, Trama Impresores S.A.
- Sierra Caballero, F.. (2000). Comunicación Educativa y Económica Política.
Apuntes sobre Políticas Culturales e Innovación Tecnológica (p. 26).
- http://www.ull.es/publicaciones/latina/aa2000vfe/sierra.html.
- Subercaseaux, B.. (2007). Raza y Nación: El caso de Chile. Santiago de Chile: A
Contra Corriente. Vol. 5.
- Steenbuck, U.. (2001). Inmigrantes Alemanes rumbo a Chile en el siglo XIX. En
Desde Hamburgo a Corral, Diario de viaje a bordo del velero Hermann (p.
35).Santiago de Chile: Pehuén Editores.

105
- Taylor, S. J. & Bogdan, R. (1984). Introducción a los Métodos Cualitativos de
Investigación. La Búsqueda de Significados Barcelona, España: ed. Paidós.

- Traversso, E. (2007). Historia y Memoria. Notas sobre un debate. En Historia


Reciente. Perspectivas y desafíos para un campo en construcción (p. 72). Buenos Aires,
Argentina: ed. Paidos.
- Treutlker, P.. (1958). Andanzas de un Alemán en Chile (1861 – 1963) (p. 160).
Santiago de Chile: Editorial del Pacifico.
- Vergara & Barros. (1940). El Modo de Ser Aristocrático: El Caso de la
Oligarquía Chilena hacia 1900 (p. 46). Chile: ed. Aconcagua.
- Villoro, Luis. (2002). Estado Plural, Pluralidad de Culturas (p. 18). México
D.F.: ed. Paidós.
- Valko, J.. (2010). Desmitificación del Inmigrante Alemán en Don Helmuth, el
Colono de Carlos Fuenzalida Valdivia. Estados Unidos: Acta Literaria Nº 40, I
Seminario. East Carolina University. P. 52. http://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-
68482010000100004&script=sci_arttext
- Wallerstein, I.. (2006). Análisis de Sistema – Mundo. México D.F: Editorial
Siglo XXI.
- Young, George F.. (1974). The Germans in Chile: Immigration and
Colonization,
1849-1914 (p. 77). Staten Island, N.Y.: Center for Migration Studies.

Archivo Emilio Held Winkler.


- Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 38.
Santiago de Chile: Archivo Emilio Held Winkler.
- Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 41.
Santiago de Chile: Archivo Emilio Held Winkler.
- Correspondencia entre Bernardo Philippi y el Estado Chileno. Carta núm. 98.
Santiago de Chile: Archivo Emilio Held Winkler.

Entrevistas.

- María Ovando.
- Inara Wenchu.
- Antonia Antilaf Wenchu.

106
- Ramona Antilaf Wenchu.
- Juan Chicó.
- Orlando Chicó.
- Robertina Reñipan

107

Potrebbero piacerti anche